tent by Oy my ony 7 et AAD Ls é anti (Sent yee ANALES DE HISTORIA NATURAL POINGASE Bis DE LA SOCIEDAD ESPANOLA DE HISTORIA NATURAL. SERIE hl TOMO OCTAVO CREST ET) MADRID: DON I. BOLIVAR, TESORERO PASEO DE RECOLETOS, 20, BAJO.—PALACIO DE BIBLIOTECAS Y MUSEOS NACIONALES 1899 Articulo 27 del Reglamento. [Las opiniones emitidas en las Memorias publica— das en los ANALES son de la exclusiva responsabilidad de sus autores. IMP. DE FORTANET, LIBERTAD, 20 MEMORIAS DE His Or As Naw RAL. CONTRIBUGION JEN IG @) 15¢j 7.0 AD al e wy ad le OM bee SUPLEMENTO II POR Mie Pe SAE IT AS AIR MERIT N oO. (Sesidn del 3 de Noviembre de 1897. ) a a a eae Examinando nuevamente la vegetacién espontanea del ul- timo valle que recorre el Mifio antes de sumirse en el Atlan— tico dimos con especies no catalogadas en nuestra obra Coi- lribucion a la Flora de Galicia, las cuales insertamos en este Suplemento. A ellas agregamos otras encontradas en las varias excursiones botanicas verificadas en el verano proximo pasado a puntos bien diferentes de Galicia. Hizose la primera y mas prolongada a la rica villa de Verin, provincia de Orense, en la cual permanecimos desde el 5 al 23 de Julio, (1897). Visitamos con bastante detenimiento su fértil y dilatado valle, que ocupa 17 km. de longitud por 3 préximamente de anchura, rodeado de pintorescos pueblos, situados al pie de los montes 6 colinas que limitan su contorno, y regado por los rios Tamega y Rubal. Tanto por el tiempo dedicado a herborizar como por la dife- rencia de suelo y clima de la mencionada comarca, compara- dos estos datos con los semejantes de la cuenca extrema del rio Mino, de donde procede la mayoria de las plantas hasta 6 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (2> ahora por nosotros recogidas, era de esperar un acopio abun— dante de especies distintas. Otra excursidn, aunque demasiado rapida, realizada el 5 de Agosto (1897) a la isla del Faro, la mas extensa de las que for- man el grupo de las Cies, que defienden la entrada al puerto de Vigo, nos ofreciéd algunas especies que agregar 4 nuestro herbario. Finalmente, del 18 al 25 tuvimos ocasién de exami- nar la vegetacién espontanea, asi en la renombrada isla de la Toja y otras 4 ella proximas, como en el territorio pertene- ciente 4 los pueblos de Noalla y el Grove. De vuelta de este viaje nos detuvimos algunos dias en el valle del Porrino, reco- rriendo especialmente los campos del pueblo de Mosende (1). Las palabras Verin, Cies, Toja y Mino indicaran la localidad en donde vegetan las especies del siguiente catalogo. Comparando la vegetacién espontanea de los diversos para— jes visitados en las pasadas excursiones con la existente en el ultimo valle del Mino, que es el que mejor conocemos en su aspecto fitoldgico, salta a la vista que ella va siendo mas y mas distinta 4 medida que se aleja de la costa y asciende ha- cia el Norte. Sin embargo, aun en el valle de Verin, que par- ticipa no poco del clima y terreno de Castilla, hemos notado unas 400 especies idénticas a las que viven en la regiédn mas occidental regada por el Mino. A pesar de haber recorrido tan solo una cortisima extensién de Galicia, hemos podido observar, sumando las del presente Suplemento con las consignadas en la obra indicada al princi— pio de este escrito, 898 especies, algunas mas que las com- prendidas por el Sr. Planellas en su Husayo de una flora fanero- gamica gallega (2); de modo que en las cuatro dilatadas provin- cias gallegas, con su variedad de terreno, exposicion y altitu- des, ha de producirse una vegetacion riquisima, como lo prue- ba el que nuestro querido é¢ infatigable explorador de los te- soros naturales de su pequena patria, D. Victor Lopez Seoane, haya logrado reunir nada menos que 2.000 especies vegetales de Galicia. (1) Propiamente el valle, donde esta enclavado tanto este pueblo como el de Fon— tellas, etc., que también se mencionan en las siguientes pdginas, se llama Lourina; conservamos, sin embargo, el de Porrino, por ser més generalmente conocido. (2) Nose incluyen en este cdilculo las enumeradas en el Suplemento J. (3) Merino.— FLORA DE GALICIA. -1 Equisetaceas IV. 1. Hgwisetum silvaticum L. Es bastante abundante en los bosques proximos al Mino, frente al pueblo de las Kiras. Lemnaceas Fiid/. 2. Lemna minor .. Comun en los charcos de Monterey, como también en el rio Tamega, Verin. Asimismo vive en algunos arroyos en Bouzas y Vigo. Gramineas /iss. 3. Phalaris minor Retz. La hemos encontrado en las tierras cultivadas de Noalla (Toja). Ops. Las canas son a menudo ramosas en la mitad inferior. En el valle de Verin, y especialmente en los alrededores de la villa que le da su nombre, entre las zarzas y endrinos que bordean algunas sendas, crece una graminea que nos llamo poderosamente la atencidn. El aspecto de sus espiguillas, cuando la maduracién del fruto esta avanzada, es por extre- mo gracioso; de uno y otro lado de ellas sobresalen numero- sas cerdillas, rectas y simétricamente dispuestas 4 modo de finisimas alas, como si con ellas quisieran proteger el fruto. Kxaminada mas minuciosamente, ndtase que las bracteas son desiguales, que el numero de flores es constantemente dos, una fértil sentada, que es la que ostenta los cilios marginales, y otra estéril pedicelada, con pedicelo relativamente largo (de 2-3 mm.), esto es, aloo mas largo que la misma espiguilla, y el fruto, no adherido a las pajas, convexo con regularidad por ambas caras. Este conjunto de caracteres, a los cuales se atiende, si no como exclusivos, como principales en la clasi- ficacién de los g@éneros, no conviene, en nuestro humilde sen- tir, 4 ninguno de los géneros de gramineas de que tenemos conocimiento, no sdlo con referencia a los que vegetan en esta regién, sino a los que pueblan nuestra Peninsula, 4 juzgar 8 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (4) por las descripciones del Prodromus Flore Hispania y del Supplementum de Willkomm. El género con que tiene mas parecido es el PA/ewm, del cual también difiere, en que el nues- tro lleva las glumas desiguales, siendo éstas apenas aquilla- das; no se dice como se encuentra en el Phlewm la flor rudi- mentaria ni hemos logrado ver en esta comarca ninguna de sus especies; en el nuestro dicha flor es estipitada, como queda indicado. Ademas, si se excepttia el PA. tenue Schr. y el Ph. as- perum Vill., todas las otras especies de PAlewm tienen la quilla de las glumas ciliada, lo que no acontece en la nuestra. De los dos PAleum antes exceptuados distinguese el nuestro, en- tre otros caracteres, por la forma de las glumas. Por los caracteres expuestos parécenos que esta planta, en el orden sistematico de los @éneros, debe figurar al lado del Phleum UL. Verinea (gen. nov.) Spicule in thyrsum spiceformem, cylindricum, laxiflorum, congeste, biflore; flore altero, inferiore, sessili, fertili; altero, superiore, pedicellato, sterili: glumis inequalibus glabris, acuminatis, nervosis, nervo medio eminentiore; inferiore flo- res wquante, superiore longiore: palea inferiore floris fertilis canaliculata, apice truncata, striata, punctulato-tuberculata, margine long ciliata; palea superiore multo angustiore, sca- rioso-hyalina a medio ad apicem bidentatum cillis margina- libus brevibus ornata; flore sterili glabro; semine oblongo- ovato, fusco, utrinque convexo. Espiguillas de dos flores, una de ellas, la inferior, sentada y fructifera; la otra, la superior, pedicelada, estéril, reunidas, formando tirso espiciforme cilindrico, laxifloro: glumas des- iguales, lampifas, terminadas en punta agudisima, nervia- das, siendo el nervio central mas distinto y elevado; la infe- rior, que es la mas corta, iguala 4 las flores; la superior mas larga: paja inferior de la flor fértil acanalada, truncada en el dpice, estriada, punteado-tuberculosa, llevando en la margen cerdillas larguisimas; paja inferior mas corta y angosta, esca- rioso-hialina, con cerdillas marginales menores, dispuestas desde el medio al Apice bidentado: la flor estéril es completa- inente lampifa: semilla oblongo-aovada convexa por ambas caras y de color pardo obscuro (castano) cuando madura. 5) Merino.— FLORA DE GALICIA. 9 4. Verinea pterostachys. Culmo stricto 3-5 dm. |.: vaginis longis nudos omnes tegen- tibus, sulcatis, pubescentibus; ligula elongata; foliis lineari- bus planis, siccis margine revolutis: gluma inferiore late ova- ta, nervo medio ad apicem excurrente, superiore lanceolata longius acuminata: palea inferiore floris fertilis ad duos ner- vos margini contiguos longissime ciliata, cillis ipsius palew latitudinem ter quaterve superantibus, sub anthesin pale adpressis, demum explicatis; floris sterilis glabri et ex pedi- cello apice articulato valde decidui paleis ineequalibus obova- tis truncatis v. emarginatis: semine longitudinaliter striolato, stria ventrali paulo profundiore, et transverse minutissime ruguloso (sub lente). La cana es derecha de 3-5 dm. de alt.: las vainas, surcadas y pubescentes, son tan largas que dejan cubiertos todos los nudos; ligula alargada, hojas lineares y planas en estado ver- de, pero arrolladas por la margen cuando secas: gluma infe- rior anchamente aovada con el nervio central prolongado hasta la punta; la superior, lanceolada, remata en punta mas larga; la paja inferior de la flor fértil eva en los dos nervios conti- guos ala margen cerdillas 3-4 veces mas largas que el diame- tro de la misma paja; dichas cerdillas permanecen ocultas de- bajo de la gluma, hasta que durante la maduracion se extien- den y ponen rigidas, sobresaliendo con mucho a uno y otro lado de las espiguillas: la flor estéril es lampina y muy caedi- za, a causa de estar articulada en el vértice del pedicelo y sus pajas desiguales trasovadas, truncadas 6 escotadas en el api- ce; lasemilla presenta pequenisimas rugas transversales, ade- mas de estrias longitudinales, siendo algo mas profunda la estria ventral. Perenne. \. Alopecurus nigricans Horn. No es abundante; prodticese en los parajes encharcados del cuarto kil6metro cerca del Mino y frente al pueblo de Salcidos. Oss. En ningtn ejemplar hemos notado arista alguna; ia espiga, ora es verde, ora de un matiz violaceo intenso. 6. Spartina stricta Rth. Aparece abundante en una de las islas proximas 4 la de la Toja, enfrente del pueblo de Noalla (Toja). 10 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (6) — i. Cheturus prostratus Hack. Guiados por la descripcién que los Sres. Willkomm y Lange hacen del Chelurus fasciculatus en el Prodromus Fl. Hisp., donde se omite el Chelurus prostratis, hubimos de referir la planta abundantisima en este valle al Cheturus fasciculatus. El Sr. Willkomm (1), en la lamina 77 (B) y (C) y en la descrip- cién que agrega, senala las diferencias de las dos especies, siendo la nuestra el Cheturus prostratus encontrado por los Sres. Lange y Seoane en los alrededores de la Coruna. Los ejemplares de esta curiosa especie que se crian en las inmediaciones del Mino, especialmente en el primero y cuarto kildmetro, son variables cuanto al nimero de canas que nacen de la misma raiz, ora es una 6 dos, ora en mayor numero; asi- mismo unas veces crecen derechas, otras patentes y otras casi tendidas por el suelo. Arrhenatherum elatius v. genuinum Godr. (V. Contr. a la Flora de Gal., nim. 296.) Bastante comun en los collados de este valle del Mino en el cuarto kildmetro. 8. Glyceria plicata Fr. Prodticese, aunque escasa, en los regatos del cuarto kildé- metro (Mino). Molinia cerulea v. vivipara (v. 1.) (V. Contr. a la Fl. de Gal., num. 723.) Se dan ejemplares en las margenes del rio Louzo, frente a Mosende (valle del Porrino). 9. Cynosurus echinatus L. Comin en toda la regién de Verin, especialmente entre los sembrados. 10. Vulpia ciliata Lk. Escasa en nuestro valle del Mino, dandose al final del cuarto kildmetro; abundante cerca del pueblo La Rasela (Verin). Vulpia alopecurus v. vulgaris Bss. (V. Contr. a la Fl. de Gal., nim. 173.) Existen ejemplares cerca de la barra del Mino. (1) Illustraciones Flore Hispania... (7) Merino.— FLORA DE GALICIA. 11 ll. Festuca pratensis Huds. Dase 4 orillas del Tamuje y en los prados del cuarto kild- metro (Mino). 12. Bromus sterilis L. Escasa; producese en los arenales del primer kildmetro (Mino). 13. Triticum vulgare Vill. Subespontanea en los alrededores de Verin. 14. Triticum durum Dest. Cultivada en Verin. 15. Brachypodium mucronatum Wk. Bastante comun en las margenes de los arroyos en Verin. 16. Brachypodium distachyrem P. B. Abundante en las margenes del Tamega en Verin. Cyperiaceas /uss. 17. Carex Camposii Bss. et Reut. Escasa; existe en terrenos himedos cerca del pueblo del Rosal (Mino). Oss. Esta especie no alcanza tanta altura como la C. /@vi- gata, pero en cambio es mas robusta. Los pedunculos de las flores femeninas son en gran parte exertos, principalmente el de la inferior. 18. Scirpus Tabernemontani Gmel. Le hemos visto en un arroyo cerca de las aguas de Calde- linas (Verin). Scirpus maritimus v. 7) gracilis (v. n.) (V. Contr. a la Flora de Gal., nim. 399.) «Caule foliisque angustioribus, anthela e spicularum ses- silium fasciculo et 1-2 spiculis solitariis longeque peduncula- tis composita; stigmatibus duobus.» La cana y hdjas son mas angostas que en el tipo; ademas del hacecillo de espiguillas sentadas leva una 6 dos espigui- llas solitarias con pedinculo largo. Se da en el territorio del pueblo de Noalla, cerca de la playa de la Lanzada (Toja). 12 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (8) Juncaceas Barilling. 19. Juncus squarrosus L. Sélo hemos dado con un pequeno grupo cerca de las aguas de Sousas (Verin). 20. Juncus capitatus Weig. Aparece, aunque no abundante, en el cuarto kildmetro de este valle del Mino. 21. Luzula lactea E. Mey. Hscasa; dase en el valle de Verin, cerca del pueblo de Al- varellos, en las pendientes aridas. Calitriquineas Z/. 22. Calitriche verna Ktzg. Rara; la hemos encontrado en un sitio htmedo de las in- mediaciones de Goyan (valle del Mino). Urticaceas Juss. 23. Parietaria lusitanica L. Kscasa; hase encontrado un numeroso grupo en el valle de Verin, bajo el hueco de un pefasco, cerca del sitio deno- minado pozo do demo. Quenopodiaceas Lin///. 24. Sueda maritima v. 2) vulgaris Moqu. Abundante en la arena fangosa de la Toja y en las demas islas vecinas 4 la misma. — v. 8) spicata Wk. Se da juntamente con la anterior variedad. 25. Sueda fruticosa Forsk. Escasa en la isla de la Toja y abundante en las inmediatas. 26. Obione portulacoides Moqu. Comin tanto en la Toja como en las islas inmediatas. (9) Merino.— FLORA DE GALICIA. 13 27. Alriplex nivea (sp. Nn.) «Prostrata, ramosissima, tota undequaque niveo-tomen-— tosa: foliis alternis v. infimis oppositis, crassiusculis, obtusis v. obtusissimis, mucronatis, basi semper cuneatis et in bre- vem petiolum attenuatis; inferioribus et mediis oblongo-ova— tis, basi in parvam auriculam protractis, plus minusve sinua- to-dentatis; superioribus oblongis, subintegris: floribus axilla- ribus, glomeratis, paucifloris, fructiferis plerumque 1-3: brac- teis fructiferis breviter pedunculatis rhombeis (sunt enim tam late vel parum latiores quam long) coriaceis, ad medium coalitis, inde ad apicem 1-2 dentatis, basi cuneatis, dorso ner- vosis, rugis interjectis, et 2-3 tubercula gerentibus: fructu lenticulari, pallido, conspicue et obtuse marginato, sulco levi prope marginem cincto.» Planta tendida por el suelo, muy ramosa, vestida en todas sus partes de tomento blanco como la nieve: las hojas son alternas 6 alguna vez las inferiores opuestas, carnositas, obtu- sas 11 obtusisimas, mucronadas, en forma de cuna por la base y adelgazadas en corto peciolo; las inferiores y medias oblon- go-aovadas, llevando una pequena auricula en la parte infe- rior del limbo, el cual es sinuoso-dentado; las superiores oblon- gas casi enteras: flores dispuestas en glomérulos axilares de pocas flores, las fructiferas casi siempre 1-3: bracteas fructife- ras rombeas tan anchas 6 poco mas anchas que largas, soste- nidas por pedtinculos cortos, coriaceas, soldadas en la mitad inferior con 1-2 dientes en el borde libre; el dorso de las mis- mas presenta rugas entre los nervios prominentes, y alguna vez 2-3 tubérculos; el fruto lenticular de color palido con mar- gen bien distinta, obtusa, mediando un surco poco profundo entre ella y la parte média del fruto. Kste Atriplex, por la consistencia coriacea y casi lefosa de las bracteas fructiferas, pertenece sin la menor duda al primer grupo de la primera seccién ZeutMopsis Dumost. En este grupo la A. vosea L. y la A. laciniata L. son al primer aspecto bien distintas de la nuestra, la cual no posee o6r- gano alguno verde. Del 4. Halimus L. difiere tarnbién, por no ser de consistencia lehosa ni erguida 6 ascendente, ni las espigas fructiferas se hallan desnudas de hojas, etc. Por fin, se separa de la A. glauca L. porque ésta tiene las ho- jas pequenas, amontonadas, sentadas y enteras, cualidades 14 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (10) que no ofrece la nuestra, sino otras completamente distintas. Sélo en la isla de la Toja hemos observado esta planta, no apareciendo en ninguna de las islas vecinas que hemos visi— tado. El nimero de ejemplares es bastante considerable por el lado que mira al Grove. 28. Atriplex patula L. v. x) genuina Godr. Hay ejemplares, aunque pocos, junto 4 la atalaya del puerto de La Guardia. 29. Atriplex littoralis L. Muy escasa; danse algunas plantas de esta especie en la isla de la Toja. 30. Chenopodium urbicum L. Comtin en los alrededores de Verin. Beta maritima L. v. x) crispa (v. n.) (V. Contr. a la Fl. de Gal., num. 547.) «Foliis margine valde crispa minutim et irregulariter ser- ratis.» Todas las hojas de esta planta tienen la margen muy ri- zada con dientecillos irregulares numerosos. La hemos observado en la costa préxima 4 La Guardia. Santalaceas R. Pr. 31. Osyris alba L. Danse algunos ejemplares en los montes de San Juan de Tabagon (Mino). Dipsaceas /Jai//. 32. Dipsacus silvestris Mill. Comiin en las tierras de Noalla, cerca de la Toja, y mas aun en los alrededores de Verin. 33. Ptlerocephalus papposus Coult. Es bastante escaso; vense ejemplares en los montes aridos cerca de Alvarellos (Verin), y en derredor de la atalaya de Monterey. (11) Merino.— FLORA DE GALICIA. 15 Compuestas /. 34. Pulicaria arabica Coss. Comtin en los parajes cenagosos cerca de las aguas de Sousas, y muy abundante en el campo llamado Tetuan, cerca de Verin. 35. Inula viscosa Ait. Comunisima en las cercanias de Verin, en las praderas y hondonadas frescas. 36. Filago germanica v. 8) lutescens Coss. Abundantisima en los campos de Verin. 37. Filago arvensis L. Tan abundante como la anterior y en los mismos sitios. 38. Helichryson stechas DC. Abundante en los montes que rodean a Verin. 39. Achillea odorata L. Comin en los prados y a orillas de los caminos en Verin. 40. Anthemis arvensis L. Comun en los campos cultivados de Noalla y en los inme- diatos a la Lanzada (Toja). Leucanthemum vulgare Lamk. (V. Contr. « la Fl. de Gal., ni- mero 551.) — vv.) atratum Gr. Godr. Escasa; dase en los alrededores de Caldelas. — v.y¥) Airsutum Hartm. Aparece alguno que otro ejemplar junto a la via férrea en Caldelas; ultimamente le hemos recogido en la costa de La Guardia asociada al Z. crassifolium Lge. 41. Leucanthemum latifolium v. %) lacustre DC. (Pau!). Crece bastante copiosa en las lindes de las tierras cultiva- das en Caldelas. Planta nueva para la flora espanola. 42. Pyrethrum Parthenium Sm. Escaso; dase 4 la vera de los caminos en Verin. 43. Senecio gallicus Chaix. Se le ve con frecuencia en los terrenos cultivados de Verin. 16 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (i2) 44. Kenlrophyllum lanatum DC. Abunda en los alrededores de Verin, y también, aunque no tanto, en el pueblo de Noalla, no lejos de la Toja. Oss. En nuestros ejemplares los tallos son muy poco la- nosos mayormente en la mitad inferior y casi nada las hojas. Kl tubo de los flésculos, inflado en la parte superior y recorrido de lineas negras, sobresale con mucho por encima de las esca- mas calicinas internas. 45. Centaurea calcitrapa \.. Bastante comtin en las afueras de Verin. 46. Centaurea incana Lag. Escasa; le hemos visto en las tierras labradas en Verin. 47. Serratula tinctorea L. No es muy comun; dase en Salcidos (barrio de las Cacha- das), Mino y en las margenes del rio Louro, no lejos de Mo- sende ; asimismo en la Toja. 48. Serratula Seoanei Wk. V. Willk., Suppl. Prodr. Fl. Hisp., p. 98; Llusir., tn, p. 104, tab. 149.—Producese cerca del Porrino, en el paraje nombrado Cabral. Hemos notado algunos ejemplares de flor blanca. 49. Onopordon Acanthium L. Abundante cerca de las casas y 4 orilla de los caminos en Verin. Cast. Toba, Espina blanca. 50. Cirsium microcephalum Lee. Escaso; hay ejemplares cerca del Louro frente al pueblo de Pontellas (Porrino). 51. Cirsium Anglicum Lob. Bastante abundante en los linderos de las tierras labradas cerca de Verin. Cirsium filipendulum Lge. v. aggregatum (v. n.) (V. Contr. a la Fl. de Gal., nim. 521.) «Caule ad calathia usque folioso; calathiis 2-3 in caulis apice congestis et foliis supremis insidentibus.» Diferénciase de la especie en tener el tallo folioso hasta la (13) Merino.—FLORA DE GALICIA. 17 cima, en donde lleva 2-8 capitulos florales. La configuracién de las hojas, tanto radicales como caulinas, y la de las cabe- zuelas, es idéntica a la del C. filipendulum Lee. 92. Carduus Gayanus Dur. Le hemos encontrado asi en el tercer kildmetro de este valle del Mino, como en las inmediaciones de Verin. 03. Carduus tenuiflorus Curt. , Parece escaso; dase en los terrenos cultivados cercanos a las aguas de Sousas en Verin. 54. Sibylum Marianum Gartn. Abundante, tanto en Monterey como en los alrededores de Verin. 55. Hispidella hispanica Lamk. Comin en los terrenos cultivados de Verin. 06. Helminthia echioides Girtn. Escasa; dase en las laderas y prados de la Lanzada, cerca de Noalla (Toja). 57. Lactuca chondrilleflora Bor. Bastante comun en el valle de Verin, v. g. cerca del pozo do demo. 58. Lactuca dubia Jord. También aparece abundante en los arrabales de Verin y en las margenes de la carretera que conduce a las aguas de Caldelinas. Hieracium pilosella v. 8) pilosissimum Fr. (V. Contr. a la Flora de Gal., niim. 630.) JYomtin en los montes que rodean el valle de Verin,. 59. Hieracium castellanum Bss. et Reut. v. pilosum Scheele. Comin en los montes de Monterey, v. g. en el solar del antiguo Colegio de la Compafiia de Jesus. Andryala integrifoliav. pinnatifida (v.u.)(V. obra cit., n. 581.) «Foliis omnibus, exceptis summis subintegris, pinnatifi- dis, laciniis linearibus v. linear-lanceolatis.» Ksta planta aqui rara tiene las hojas profundamente divi- ANALES DE HIST. NAT.— XXVIII. 2 18 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (14) didas en lacinias lineares 6 linear-lanceoladas, 4 excepcién de las superiores que son enteras 6 algo dentadas. . Campanulaceas /iss. 60. Jasione perennis Lamk. Comun en el valle de Verin, v. g. cerca del pueblo la Rasela. Jasione humilis v. 6) tomentosa. (V. Contr. a la Fl. de Gal., ni- mero 615.) Abundante 4 la vera de los caminos, v. g. junto 4 la ca- rretera que lleva de Verin 4 Ginzo. Rubiaceas /vss. 61. Galium vernum Scop. Hay algunos ejemplares en los bosques vecinos a las aguas de Sousas, Verin. Galium saxatile L. (V. Contr. a la Fl. de Gal., nim. 681.) Oss. Esta planta, muy extendida por toda Galicia, no lleva todas las hojas verticiladas de seis en seis, como cons- tantemente se asegura en las descripciones, sino que las infe- riores, tanto de los ramos floriferos como de los estériles, lo estan de cuatro en cuatro. 62. Galium rivulare Bss. et Reut. Comtin también en las varias comarcas de Galicia que he- mos recorrido. 63. Galium debile Desv. v. congestum Gr. Godr. Abunda en los parajes htiimedos del cuarto kildmetro en este valle del Mino. Plantagineas /iss. 64. Plantago carinata Schrad. Existen numerosos grupos de esta especie en algunos pa- rajes del valle de Verin inundados en la estacién de las llu- vias, v. g. cerca de los banos de Caldelinas. <15) Merino.— FLORA DE GALICIA. 19 Ericaceas Zind/. Calluna vulgaris v. pubescens Koch. (V. Contr. a la Fl. de Gal., nim. 714is,) Rara; la hemos visto en las cercanias de Goyan, Mino. Plumbagineas /d/. 65. Statice Limonium L. v. 2) genuina Bss. Abundante en las islas proximas a la de la Toja, nave- gando en direccién a la Lanzada. Labiadas iss. Origanum virens for. tnodora, Nos ha llamado la atencion que esta planta, no escasa junto 4 los caminos de Verin, sea inodora, cuando los ejem- plares del valle del Mino despiden un aroma muy subido. 66. Melissa officinalis L. Riberas del rio Tamega, Verin. Cast. Melisa, Torongil. Gall. Trungil. (or) ~ Stachys germanica L. Alrededores de Verin. 68. Stachys sylvatica L. La hemos visto 4 la vera de la carretera de Portugal en Verin; vive también en las margenes del rio Tamega. 69. Betonica officinalis lL. Bastante comin en los bosquecillos cercanos 4 las aguas de Sousas en Verin. Asperifoliaceas Zid/. 70. Behium polycaulon Bss. Se encuentra buen numero de ejemplares a la salida del valle de Verin, junto 4 la carretera que lleva 4 Ginzo. 20 ANALES DE HISTORIA NATURAL, (16) 71. Lycopsis arvensis L. La hemos visto con frecuencia en las afueras de Verin al pie de las casas. 72. Anchusa undulata L. Juntamente con la anterior, si bien parece mas escasa. 73. Heliotropium europeum L. Comun en las huertas y sembrados de Verin. Solanaceas #ar//. Solanum Dulcamara v. 8) integrifolium Koch. (V. Contr. a la Fl. de Gal., nim. 715.) Orillas del Mino, cerca de las Eiras. 74. Hyoscyamus albus L. Rara; sdlo hemos encontrado un ejemplar en Verin. Escrofulariaceas Zind/. 75. Linaria elatine (L.) Desf. Abundante en las tierras vecinas a la Lanzada, Toja. Linaria Tournefortii v. y) minor Lege. Abunda en las tierras substanciosas y en los vinedos de Verin. 76. Linaria minuscula (sp. 1.) «Planta humilis 8-10 cm. |. viscido-puberula, a basi ramo- sissima, ramis erectis v. arcuato-adscendentibus, complicatis: foliis inferioribus 3-4 verticillatis, mediis et superioribus am- plioribus, sparsis, omnibus sessilibus, integerrimis, carnosulis, oblongo-linearibus, linearibusque, acutiusculis, subtus leviter canaliculatis: floribus spicatim ad apicem caulis et per totam fere ramulorum longitudinem dispositis, breviter pedicellatis: bracteis linear-lanceolatis calycem et capsulam equantibus; calycis laciniis equilongis, lanceolatis, acutiusculis, corolle tubum longe superantibus; corollee lutez infra pallidioris (sci- licet tubus et calcar), labio superiore patente, albido, bilobo, lobis obtusiusculis apertis 1 mm. long.; inferiore trilobo, lobis adhuc minoribus 2/, mm. long. obtusissimis; calcare minutis— 17) Merino.— FLORA DE GALICIA. 21 simo '/, mm. long. sursum curvato et inter calycis lacinias nidulante; seminibus reniformi-orbiculatis, nigris, disco mar- gineque angusta tenuiter tuberculatis. » Planta de pequena estatura (8-10 cm. de alt.) viscosa y pu- bescente, muy ramosa, y los ramos erguidos 6 encorvados hacia arriba entremezclados unos con otros: las hojas inferio- res colocadas en verticilo de 3 6 4; las medias y superiores es- parcidas y mayores, todas sentadas, enterisimas, carnositas, oblongas, aguditas y ligeramente céncavas por la cara infe- rior: flores con pedicelo corto, dispuestas al remate del tallo principal y en casi toda la longitud de los ramos; bracteas linear-lanceoladas tan largas como el caliz y la capsula; laci- nias del caliz iguales entre si, lanceoladas, aguditas, mucho mas largas que el tubo de la corola; ésta es amarillenta y de matiz mas descolorido en la parte inferior (esto es, en el tubo y espolon); el labio superior esta hendido en dos lobulos blan- quecinos obtusitos de 1 mm. de longitud, muy abiertos; ios del labio inferior obtusisimos y aun menores, 6 sea de ?/, de milimetro de longitud; el espoldn, sumamente diminuto, de 1/,mm. de longitud, arqueado hacia arriba y oculto entre las lacinias del caliz; las semillas son reniformes, casi redondas, negras, con el disco y margen angosta, sembrados de tubércn- los microscépicos. La mas parecida a nuestra planta, asi por la forma de las hojas como por la de la semilla, es la Z. Zournefortii, de la cual se diferencia especialmente por la longitud de las laci- nias del caliz, y mas aun por la singular conformacién de la corola, cuyo espolén, por su figura, colocacién entre las laci- nias del caliz y tamano, no tiene somejante, 4 lo que creemos, con ninguna de las especies de este género; pues el de la L. Tournefortii, v. minor Lee., Ala que se asemeja en su as— pecto general, alcanza cuando menos la longitud del tubo y labios de la corola, sobresaliendo, por consiguiente, por debajo de las lacinias del caliz. Ademas en ésta la curvatura del espolén es insignificante comparada con la del espolén de la nuestra. Criase esta planta en la isla de la Toja, en la playa arenosa que mira a la carretera del Grove. 77. Veronica officinalis v. 2) Tournefortii Rehb. Escasa; hay ejemplares cerca de Mosende frente a Porrifio. 22 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (18) 78. Odontites tenuifolia G. Don. La hemos visto en las laderas de los montes préximos al pueblo de Alvarellos, y en mayor abundancia junto 4 la Ata— laya de Monterey (Verin). Orobancaceas Zind/. 79. Phelipea lusitanica Tourn. Solo hemos notado corto numero de ejemplares en una de las islas cercanas a la de la Toja. Vive sobre las raices del Obione portulacoides Moqu. y sobre las de la Sueda fruticosa Forsk. Primulaceas Jei/. 80. Centunculus minimus L. Es bastante abundante en los prados del quinto kilometro junto al Mino; también la hemos observado a poca distancia de las aguas de Sousas (Verin), pero mas escasa. Gencianaceas Zind/. 81. Menyanthes trifoliata L. Dase en el agua remansada del sitio llamado Cabral, no lejos del Porrifio. Cast. 77ébol de agua. 82. Chlora imperfoliata L. Abundante en los prados junto al istmo del Grove, frente i la Toja. &3. Cicendia pusilla Griseb. Planta abundante en los parajes cenagosos del cuarto kildmetro, frente al pueblo de Salcidos (Mino). 84. Hrythrea latifolia Sm. Se dan numerosos grupos de esta especie en el tercer kild- metro, & pocos metros del cauce del Mino. Umbeliferas Juss. 85. Hryngium viviparum J, Gay. Se produce, aunque escasa, en el valle de Verin, cerca del puente nuevo construido sobre el rio Tamega. (19) Merino.—FLORA DE GALICIA. 23 8&6. Lryngium tenue Lam. Abundantisimo en las tierras cultivadas de Verin. 87. Torilis anthriscus Gmel. Abundante entre los matorrales y zarzales en el valle de Verin. 88. Thapsia villosa L. Es abundante en la isla del Faro (Cies); rara en el valle de Verin, dandose junto 4la Atalaya del Castillo de Monterey. 89. Tordilium maximum L. Abunda entre los matorrales de los caminos de Verin. 90. @nanthe fistulosa L. Abunda en las margenes del rio Tamegra (Verin). 91. Pimpinella villosa Schousb. Comin en los vinedos y a la margen de los caminos en Verin. Crasulaceas DC. 92. Sedum villosum L. Bastante comun en el valle de Verin, v. g. en uno de los bosquecillos proximos al manantial de Sousas, Paroniquiaceas S?. //7/. Corrigiola telephiifolia Pourr. (V. Contr. a la Fl. de Gal. n. 213.) Oss. La hemos encontrado muy abundante, tanto en las tierras aridas y entre las penas en el valle de Verin, como en la isla del Faro (Cies), con la diferencia de que en las que ve- getan en la primera regidn de las mencionadas, las hojas son mas delgadas, estrechas y separadas que en los ejemplares de las islas Cies, los cuales las llevan anchas, carnosas y muy aproximadas unas a otras. 93. Chetonychia cymosa Wk. (Illecebrum cymosum lL.) Existe un buen nimero de plantas de esta especie, rara en nuestra Peninsula, en los terrenos arenosos s de Verin, a corta distancia del ae do demo. 24 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (20) 94. Spergularia campestris (Lepigonum campestre Kinal.) Comunisima en todo el valle de Verin, ya con flores rosa- das, ya blancas. Onagraceas B/ih. et Hook. Epilobium parviflorum v. subgrabrum (NV. Contr. a la Fl. de Gal., num, 256.) Escasa; hay ejemplares en las tierras inmediatas 4 la Lan- zada (Toja). Pomaceas #ari/. 95. Pyrus communis Vv. 8) pyraster Allr. et DC. Comun en los campos incultos de Mosende, frente 4 Po- rrino. Cast. #spino; Gall. Pereira. Sanguisorbeas 7077. e/ Gr. 96. Poterium muricatum Spach. Bastante abundante en los campos incultos de Noalla y el Grove (Toja). 97. Agrimonia Hupaporia L. Hemos encontrado muy pocos ejemplares en los prados htimedos y 4 las orillas de los arroyos de Verin. Rosaceas JDC. 98. Rosa stylosa Desv. Comunisima en todo el valle de Verin. 99. Rubus Thyrsoideus Wimm. * Comun asi en este valle del Mino como en el del Porrino, cerca de Mosende. 100. Rubus tomentosus Boskh. Se ven algunos grupos de esta especie cerca del campo de Tetuan en direccién al pueblo de Alvarellos (Verin). 101. Rubus nemorosus Hayne. Encuéntrase con abundancia en el valle de Verin. Nos consta que sobre todo en el valle de Verin los dos (21) Merino.— FLORA DE GALICIA. 25 e@éneros precedentes ofrecen variedades y acaso especies nue- vas numerosas; pero el no contar en Espana con monografias, siquiera incompletas, de estos dos géneros de suyo complica- dos, y mas desde que en el extranjero se ha exagerado quizas el numero de sus especies, nos obliga a diferir para adelante el estudio de varios ejemplares que conservames. 102. Geum urbanum L. Comunisima en la margen de los arroyos (Verin). Leguminosas //uss. Vicia lutea v. 8) levigata Bss. (V. Contr. a la Fl, de Gal., nu- mero 321.) Hemos visto muy contados ejemplares al final del cuarto kilémetro, a 200 m. del Mino. 103. Lathyrus sylvestris L. Abundante entre los matorrales de los caminos de Verin. 104. Dorycnopsis Gerardi Bss. Rara; dase en los montes llamados de Santa Marta, por encima del pueblo de Quiroganes (Verin). 105. Lotus angustissimus L. Rara, tanto en este valle (Mino) como en Verin. 106. Zrifolium minus Sm. Kscaso también, habiendo encontrado solo tres ejempla- res en el barrio las Cachadas del pueblo de Salcillos y uno en Verin. 107. Trifolium suffocatum ML. Raro; sdlo se ha encontrado un ejemplar al pie del monte Torroso cerca de La Guardia. Posteriormente le hemos visto abundante en los prados del cuarto kildmetro. 108. ZLrifolium striatum L. Kscaso; dase en los prados del primer kildmetro (Mino). 26 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (22) 109. Zrifolium Bocconi Sav. Bastante abundante en las tierras medio inundadas de Salcidos (Mino). Ononis procurrens Vv. «) vulgaris Lge. (V. Contr. a la Fl. de Gal., num. 510.) — v. 8) mitis Lge. Ambas variedades se producen en las tierras inmediatas 4 la villa de Verin; la segunda especialmente en las huertas. 110. Genista falcata Brot. Es bastante abundante en las tierras incultas del valle de Verin. lll. Sarvothamnus scoparius Koch. Comun en las colinas que rodean a Verin, principalmente cerca de la carretera de Castilla. 112. Adenocarpus hispanicus DC. También abundante, asociado al precedente. 113. Lupinus varius L. Se ven algunos ejemplares en el barrio de Cividanes, per- teneciente a la parroquia de Salcidos: nueva para la flora ga— llega. Terebintaceas //iuss. 114. Rhus Coriaria L. (Secall!) Rara; existen ejemplares en el valle de Verin a corta dis- tancia de la carretera de Verin a Orense. Cast. Zumaque. Empetraceas Zind/. Corema album D. Dom. (V. Contr. a la F7. de Gal., 1.° 2474¥ater,) No habiamos encontrado esta especie mas que en la costa portuguesa, cerca de la villa de Caminha. En nuestra excur- sidn de] presente verano 4 la isla del Faro (Cies) la hemos visto abundantisima entre la menuda arena y rocas de la playa. (23) Merino.—FLORA DE GALICIA. IT Zigofileas R. Br. 115. Tribulus terrestris L. Existe en la playa de Bouzas, y mas abundante en las tierras cultivadas del pueblo de Noalla (Toja). Cast. A brojos. Poligalaceas Juss. 116. Bachytropis microphylla (L.) Wk. Escasa; crece en los montes de San Juan de Tabagén (Mino). Ops. De los ejemplares vistos unos tienen las flores azu- les y otros rosadas. Frazinus angustifolia v. &) pallida (v. n.) (V. Contr. a la Fl. de Gal., Supl. num. 623bis,) «Trunco foliisque utrinque leucopheeatis; foliis plerum- que 5 jugis, ultimo impari petiolulato, acutius serratis, sama- ris angustioribus.» El tronco y hojas de esta planta son de un color gris ce- niciento; hojuelas por lo general cinco, con la impar sostenida por peciolo corto, y los dientes de la margen mas agudos; sa- maras mas angostas que en el tipo. No poco nos han llamado la atencién algunos ejempla- res de fresno caracterizados con las cualidades expuestas exis- tentes en el sitio del valle de Verin conocido vulgarmente con el nombre de Pozo do demo. La configuracién tanto de las ho- jas con el raquis acanalado, como del fruto adelgazado paula- tinamente en forma de cuna por la base, etc., nos obligan a referirle a la especie ya dicha. No hemos podido examinar sus flores. ; Malvaceas 2&. Br. 117. Malva rotundifolia L. Muy comtn en el valle de Verin, como también en e? pueblecito de. Monterey. Asimismo aparece en nuestra costa cerca del monasterio de Oya. 23 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (24) Hipericineas D0. 118. Hypericum quadrangulum L. Abunda en las orillas de los arroyos y sitios sombrios en Verin. Alsineas Bar?//. 119. Stellaria Holostea L. Encuéntrase en las orillas de los arroyos cerca del pue- blo la Rasela (Verin). 120. Mehringia trinervia Clair. Aparece con frecuencia en las margenes de los arroyos y sitios sombrios en Verin, v. g. cerca de la Rasela. Violacas DC. 121. Viola sylvatica v. x) micrantha Doll. Comtn tanto en el valle del Mifo como en el del Porrino. 122. Viola stagnina Kit. Abunda tanto en este valle, v. g. al pie del monte de Santa Tecla como en la isla de la Toja. Oss. Por mas que los Sres. Willkomm y Lange, en su Prodromus Flore Hispanice, t. u1, p. 698, afirmen ser la caja de esta especie aguda, nosotros constantemente la hemos no- tado mucho mas obtusa que la de la V. canina L. Droseraceas D(C. 123. Drosera rotundifolia L. Escasa; producese en el territorio de Mosende, frente a Porrino, en el sitio llamado Sampayo. Cistineas /(. Cistus hirsutus v. angustifolius (v. un.) (V. Contr. a la Fl. de Gal., num. 315.) «Foliis omnibus linear-lanceolatis v. lanceolatis; epica- lyce, calyce et capsula minoribus.» (25) Merino.—FLORA DE GALICIA. 29 Las hojas de esta planta abundante en los campos de Mosende (Porrino), son mucho mas angostas que en la especie comun en nuestro valle del Mifio; asimismo el epicaliz, caliz y caja son menores. 124. Halimium ocymoides (Lam.) Willk. v. «) erectum Wk. Bastante comun en los montes que median entre la ca— rretera de Castilla y el pueblo de Abedes (Verin). Tuberaria vulgaris v. &) lanata (v. Contr. a la Fl. de Gal., ni- mero 439.) Escasa; dase en los montes proximos al pueblo de Quir6- ganes llamados de Santa Marta (Verin). Tuberaria variabilis v.y) Cavanillesii (v. Contr. a la Fl. de Gal., num. 369.) Abundante cerca de la Atalaya de Monterey (Verin). Cruciferas ZL. 125. Cakile maritima (L.) Scop. Se produce en el segundo kilédmetro del Mino y en el istmo del Grove (Toja). 126. Lberis procumbens Lee. Abundantisima en los arenales de la isla del Faro (Cies). 127. Alliaria officinalis Andrz. (Sysimbrium Alliaria Scop.) Abundante al pie de los regatos del valle de Verin. 128. #rysinum linifolium (P.) J. Gay. Sélo hemos visto esta especie y en gran abundancia en la isla del Faro (Cies). Willkomm la Nama memorable, quizas por los muy diversos nombres que ha venido recibiendo de muchos botanicos y por ser la tinica especie de este género que presenta purpurinos los pétalos. 129. Mathiola sinuata (P.) R. Br. Escasa en la isla del Faro (Cies) y abundante en los are- nales del istmo del Grove (Toja). No sdlo las silicuas llevan tubérculos espinescentes, sino también con frecuencia las ho- jas radicales 6 inferiores. ; et ANALES DE HISTORIA NATURAL. — imine ak TUsSe sh 130. Papaver hybridum f- yarn Bastante comitin en las tierras labradas de Noalla ( Tc 131. Papaver dubium L. ALT Sélo la hemos encontrado, y no abundante, entre ose Se brados del valle de Verin. Ranunculaceas /iss. 132. Delphinium Cardiopetalum DC. Comunisima dondequiera en el valle de Verin. Verinea plerostachys Merino 4 sf Hinwwienedi basnnlettonee v cf tau ti 4.4% cilaa* lacs, idSinet ner weenie a * . , s 2 3 $ 3 = id 3 & coh “owen Mg 18 \ § 4°2 id arma ane my ans y Onn eee wr st a i ac ie wana me Wf ey Alriplex nivea Merino Linaria minuscula Merino vey 3? ages Alita natenzs matte Ve w c v + 4 stwills kn eonnae COAe v eee | ° 2. 3 aos Ses aay Si oos 2 % a4 ee ry) 2 Hi he pe Pip en Hy glen! ; ; Ene Bh. i aint Boyar ¥ ; A oe “Va p My A} TRCN Ny Cl " AT ar aig sit, fag one SGN Re ee 2h Ae TE NN aa he Ye A Weir ‘i Mea ity tN ir an} a ji ay nA Hh Key! ” Pree, es A a tie oh ea iy “te : . 0 eon. fs yapr- We om eee aie nen TARY vale i ma we ec a rays 4 eae DM a a eb ae tT at Sh tere Wis \ dt ead ag hi ye 2 eae ri oe hey the eb t iy Tso ihe 1 MN t The if Mii Hy ny i ca (. i , rong ah Wy ey \ Me if e h rs spy) Cait Cape anes Drea Pe allt rasta he oad (hath a i Pa hh wee ny tf Se >, at Pr aa } iy . a sail EL PROFESOR DON BRUNO SOLANO TORRES POR DON HILARBRION JIMENO. La mejor prueba que puedo ofrecer del respeto y la consi— deracién que me merecen las decisiones de la Sociedad, es el haber aceptado, en momentos de verdadera angustia para mi espiritu, el encargo que me hizo de dedicar un recuerdo en la sesidn de hoy 4 la memoria del ilustre maestro que presidia, por deseo unanime, las tareas de esta Sociedad, hijuela de la ESPANOLA DE HISTORIA NATURAL, que desde Madrid tan merito- ria y perseverante labor realiza por dilatar los confines de la ciencia patria. Pero no dijera toda la verdad si callase que, aunque reco- noci pronto las dificultades de misién tan honrosa, no dejé de halagarme la ocasién que se me ofrecia para salvar mi nom- bre de bien ganado olvido, si consignando fechas y evocando recuerdos lograba que sus propios méritos bosquejasen la ve- neranda figura del sabio aragonés, y transmitia a la posteri- dad el ejemplo de su vida dedicada por entero a la ensenanza de la verdad y del bien. Confieso, sin embargo, que me engané en mi intento, pues sin duda por lo que tenia de vanidad, aquilatando mis apti- tudes y la magnitud de la empresa, al tratar de realizarla, me convenci luego que anduve ligero en ofrecer lo que todavia dudo si he sabido cumplir en la forma que merece la Corpo- racion, por querer honrar la memoria del Decano de la Facul- tad de Ciencias de Zaragoza, Director de su Escuela de Artes y Oficios y Presidente de nuestra Seccién, D. Bruno Solano Torres, fallecido en Santander el 19 de Febrero de 1899. 32 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (2) Nacido en Calatorao el dia 6 de Octubre de 1840, debieron trasladarse pronto 4 Zaragoza sus honrados padres, ya que los colegios de Berdie y Ponzano y la Academia de Bellas Artes le contaron pocos anos después entre sus mas aventajados discipulos. Datos son éstos que recordaban los que fueron sus companeros de la ninez al saber con pena el fallecimiento del Doctor Solano. Nuestro Instituto provincial conserva en su archivo los com- probantes de su aplicacién durante la segunda ensenanza, y la consulta de estos documentos permite afirmar que fueron tantos los sobresalientes que tuvo como asignaturas cursé, y que el grado de Bachiller puso digno remate a tan brillante periodo, desde el ano 1853 al 1859, mereciendo el premio extra- ordinario, una medalla de oro y, lo que vale mas aun, refie— jado en los placemes y felicitaciones conque le despidieron los que fueron sus maestros y cuantos apreciaban las dotes de su inteligencia y las bondades de su corazon. Seis anos mas tarde, después de haber estudiado en Zara— goza y en Madrid casi entera la Facultad de Derecho, termi- naba en Valencia el bachillerato de la de Ciencias que habia empezado 4 cursar en la Corte. Desde 1865, en que acabé los estudios oficiales, no perma- necieron ociosas sus aptitudes para ganar el pan de cada dia; y los que fueron educados en el colegio que en El Escorial dirigia el sabio pedagogo P. Dionisio Pagés recuerdan atin las explicaciones de profesores como Eleizalde y Solano, que alli acendraban su vocacién para el magisterio ensenando huma-— nidades el primero y matematicas el segundo, y sellaban a la vez con bien sentidos afectos la amistad fraternal que habia de unirlos hasta la hora de la muerte. Desde Kl Escorial debié salir para Sevilla, cuando en Octu- bre de 1867 fué nombrado por la Direccién general de Instruc- cion publica auxiliar de las catedras correspondientes 4 la sec- cion de Ciencias de aquel Instituto, con el sueldo anual de 500 escudos, y en aquel centro docente, y en el de Malaga, seguin creo haberle oido, pasd un ano en compania de sus libros, aprendiendo el inglés y el alemén, cuyos idiomas dominaba desde entonces, pero de nadie envidiado, porque de todo ca— recia. Al ano siguiente los sucesos que tan honda transformacioén 43) Jimeno.—p. BRUNO SOLANO TORRES. 33 produjeron en todos los organismos del Estado debieron traerlo a Zaragoza, y al establecer por vez primera la Excma. Dipu- tacién provincial los estudios libres de la Facultad de Cien- -cias confirié al Dr. Solano la ensefianza de la Quimica gene- ral y le encargé mas tarde las catedras de Geometria analitica y fluidos imponderables, casi al mismo tiempo que el muy ilustre senor Rector le designaba para sustituir al catedratico numerario de Ampliacioén de Fisica en ausencias y enferme- dades. En Diciembre de 1868 fué nombrado catedratico de Aritmé- tica y Geometria de la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza, y los 800 escudos anuales asignados 4 esta plaza fueron sus uni- cos recursos, hasta que en 1877, suprimida la Facultad de Ciencias, fué confirmado por la Superioridad como profesor interino del preparatorio de la de Medicina, y continud expli- cando la Quimica general desde entonces con el haber de 2.000 pesetas, hasta que después de doctorarse en 1879 obtuvo, pre- via oposicién, «Septiembre del 81», la catedra que tantos afios habia regentado gratuitamente. Restablecida en 1882 la Facultad de Ciencias, que tan esplén- dida morada alcanza hoy entre nosotros, y merced al desin- terés y entusiasmo de profesores tan meritisimos como don Mariano Novella y D. Juan Ranz, por no citar 4 los que atin viven, se encargdé Solano de las ensefianzas de la Quimica or- ganica y de sus practicas, y sin remuneracion alguna las des- empeno hasta Abril del 97, en que se hizo cargo de ellas su catedratico numerario. Con breve intervalo ejerciéd el Decanato de dicha Facultad desde el mes de Diciembre del 87 hasta el dia de su falleci- miento, aunque solo durante cinco anos percibié la gratifica- cién de 750 pesetas, suprimida en 1892. Al final de su carrera figuraba con el num. 184 en el esca- lafon de Universidades, y por lo que tienen de reglamentarios no consignamos sus ascensos, que pobremente recompensan una vida tan llena de ensefnanzas. Era necesario, 4 mijuicio, exponer el relato fiel de su hoja de servicios; pero como todas las aptitudes de D. Bruno Solano se aunaban cuando ocupaba la catedra para dar altisimo re- lieve 4 su personalidad, convenia dar cuenta de cémo habia forjado en labor ruda y perseverante su vida el ilustre profe- ANALES DE HIST. NAT.—XXVIII, 3 34 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (4). sor, gozando del prestigio y los honores que solo aleanzan con general consentimiento los que han peregrinado tras ideales generosos por el 4spero camino de las realidades humanas. Sus discipulos no olvidaran jamas al maestro. Enamorado de la ciencia desde sus primeros anos, el estudio y la obser— vacion nutrieron su entendimiento, y él solo, ayudado de una figura venerable, que bien merece ser recordada, hizo dek Laboratorio de la Universidad manantial inagotable de prac— ticas ensefanzas que la industria y la agricultura regionales. aprovecharon en sus desarrollos y progresos. Sus lecciones, siempre nuevas, por estar inspiradas en las ultimas conquistas de la ciencia, no eran relato mas 6 menos elocuente de hechos que el fondgrafo de nuestros dias podria reemplazar con ventaja; eran conjunto armonioso de ideas comprobadas por el experimento y expuestas con toda la cla-— ridad que necesitaban para penetrar en los senos mas obscu- ros de los cerebros escolares. Sus recursos para mantener fija la atencién del auditorio, hasta el punto de convertir en tem- plo la catedra, tenian la originalidad de todos sus medios do- centes; y tan fervorosa le fué la devocién de sus alumnos que, a pesar de ser los menos los que se libraron de incentivas cati- linarias, ninguno ha dejado de llorarle como se llora la pér- dida de un insigne maestro, de un consejero leal, de un amigo del alma. Hombre dedicado a la catedra y al laboratorio, sus manus-— critos pueden hoy evidenciar el sin numero de hechos que observé y comprobé por vez primera en el terreno de la Qui— mica pura y aplicada al disponer sus lecciones 6 Conferencias. Son temas inspirados en la experimentacién mejor dispuesta, que si desarrollé su palabra prodiga en ensenanzas, la pluma no llegé 4 vestirlos con la forma que requerian para darse * conocer en la revista 6 en el libro. Sus articulos de vulgarizacién cientifica publicados en la prensa local y los informes y discursos conque correspondia a deberes ineludibles, es todo lo que se puede consultar si se quiere conocerle por sus escritos. La Oracion inaugural del curso académico del 8&7 al 88 que ley6 en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza aleanzé justa fama, y fue reproducida por las publicaciones cientificas deseosas de propagar las concepciones de Van T’Hoff referen- (5) Jimeno.— pb. BRUNO SOLANO TORRES. 35 tes Ala asimetria del carbono, que tanto han contribuido 4 los progresos de la Quimica organica. De forma irreprochable sefala el trabajo en cuestidn puntos de vista originalisimos. y sus tendencias y pensamientos que lo esmaltan son gallarda muestra de la ilustracién que atesoraba el Dr. Solano. Tocaban a su fin las obras del edificio destinado en parte a su Facultad, y habia que honrar a las grandes figuras de la ciencia situando sus bustos 6 estatuas en las fachadas y el interior, segtin los merecimientos de los representados. Solano bosquej6 los hechos de los que mas enaltecieron las ciencias, y su estudio merece ser consultado por las noticias que sumi-— nistra y la critica que las sazona. La inauguracién de aquel edificio le impuso el Ceber de his- toriar las vicisitudes por que paso entre nosotros la ensenanza de las ciencias hasta lograr instalacién definitiva en la Uni- versidad de Cerbuna, y en las paginas que leyo en tan sulemne acto conmemoro los esfuerzos de cuantos con generoso entu- siasmo dieron alientos de vida 4 la cenicienta que hoy se alber- ga en espléndido palacio gracias al teson y buena voluntad de hombres que representan en las sociedades los apoyos que ne- cesitan las potencias si han de vencer a los obstaculos. Y ultimamente, cuando tras laboriosa gestion de las corpo- raciones populares, con ayuda del Estado, pudo celebrarse la apertura de la Escuela de Artes y Oficios, que dirigid Solano desde su fundacién, did lectura a una Memoria que, con las correspondientes a cursos sucesivos, reflejan sus ideas relati- vas a la educacion del obrero y sus desvelos por que la de Za- ragoza alcanzase lugar preferente entre las de Espana. Los que deseen rendir tributo 4 su laboriosidad infatigable habran de recordar la época en que, sin desatender sus cate- dras, prestaba valioso concurso a los trabajos que realizaba la {stacién viticola creada por esta Diputacién provincial, ana- lizando inostos y vinos de distinto origen hasta conocer la pro- duccion regional cual ninguno, propagando las mejoras que debian introducirse en la elaboracién de los caldos, los medios que convenia poner en practica para su mejor conservacion y las causas de los defectos que interesaba corregir, expuesto todo en conferencias publicas, 4 las que asistia auditorio nu- meroso avido de tan titiles ensenanzas. Las epifitias que asolaron los vinedos de esta comarca en 36 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (6) anos de recordacién amarga, fueron reconocidas y estudiadas en su origen por el sabio aragonés; y tal fué el crédito de todos estos trabajos, que no hubo aldea donde no fueran estimados sus servicios y reconocido y respetado su nombre. Por entonces did sus memorables lecciones en el Circulo de Labradores, vulgarizando entre estos, los principios de la Qui- mica agricola, y entonces adiestraba a los alumnos de la es- cuela de bodegueros, 4 la vez que informaba a la Diputacién provincial, 4 la Sociedad de Amigos del Pais y a las Dependen- cias del Estado, en cuestiones sometidas 4 su dictamen. Los periddicos de aquella fecha reflejan tan fructuosa labor, y los del ano triste, los que se publicaban en los dias en que el cé- lera diezmaba la poblacién, ocasionando victimas y héroes, harian recordar eternamente con gratitud su nombre, si en documentos oficiales no constase cuanto hizo el Dr. Solano en su humilde laboratorio de la Facultad de Ciencias por encargo del municipio y para bien de todos. El examen bacteriolégico de las aguas y la valoracion en ellas de elementos que pueden perjudicar cuando se hallan en exceso, fueron trabajos enco- mendados en tan criticas circunstancias a su pericia y sus in- formes, esperados con anhelo por lo que tenian de consolado- res, contribuyeron a elevar el espiritu publico, hasta el punto de conquistar el vecindario en tan memorable campana, el timbre mas hermoso que ostenta en su blasén la inmortal Zaragoza. Las Corporaciones populares, haciendo constar en actas el sentimiento que la muerte del Dr. Solano causé en el animo de todos, se han honrado a si mismas, y sus acuerdos han sido sancionados por la opinion, con el aplauso. Transformada en Granja agricola la estacidn que fund la provincia dedicé Solano todas sus actividades a la restauraciOn de la facultad de Ciencias, y perteneciendo, desde que fué creada, 4 la Junta de obras del edificio que hoy ocupa, prodig6é sus conocimientos en la mejor disposicién de las catedras, mu- seos y laboratorios, y si no le hubieran faltado, por penurias del Tesoro, los auxilios que del Gobierno solicité, el material de ensenanza reunido en la Facultad de Zaragoza seria el mas completo de Espana. Desde que en 1893 establecié esta Universidad sus cursos de conferencias publicas contd con la valiosa cooperacién del (7) Jimeno.— D. BRUNO SOLANO TORRES. 37 Dr. Solano, y aun estan en la memoria de todos los temas que desarroll6 en anos sucesivos, y la «dificil facilidad» con que su elocuencia los hizo accesibles aun 4 los mas profanos. Los que asistieron 4 sus lecciones sobre e/ aluminio, las materias colorantes y los explosivos, escucharon y vieron cuanto tiene relacidn con tan importantes cuestiones, y al juzgar sus traba- jos se mostraban unanimes los juicios para reconocer que sdlo su talento é imaginacion en feliz consorcio, podian divulgar y embellecer tales conocimientos. Bien podia descansar entre laureles quien tan noblemente los habia conquistado, pero su labor no habia concluido, por- que estimando el Gobierno los servicios que podia prestar al frente de la Escuela de Artes y Oficios hombre de tal valia, le did ocasién en este Ultimo empeno de reiterar su amor a la ensefanza y su entusiasmo por todo lo que contribuyera a la general cultura. El ilustre Rector que compartiO con él los sinsabores y afa- nes de fundacién tan provechosa, ha escrito, por superior en- cargo la historia de ella. Cuando se publique, cumpliendo acuerdos de las Corporaciones copatronas, podra apreciarse lo que fué en sus comienzos y lo que ha llegado a ser la Es- cuela que tuvo por primer director a D. Bruno Solano Torres. (QJuiza no interese a muchos saber, pero aqui debemos recor- dar, que también las ciencias naturales tuvieron en el doctor Solano protector constante de sus progresos. La ciencia espanola que registra en sus anales, para honor de nuestro antiguo reino, la obra cientifica de naturalistas tan eminentes como Asso, Sessé, Azara, Boldo, Echeandia, Castillo Lopez, Lagasca, y tantos otros, rectifica y completa el conoci- miento de la produccién natural, merced a los trabajos que con perseverancia y abnegacion ha realizado en nuestra edad una pléyade de hombres ilustres que, formada en sus comien- zos por D. Francisco Loscos, D. José Pardo, D. Bernardo Zapater, D. Pascual Alvarez y D. Custodio del Campo, todavia se apre- cia en sus destellos por luz que irradia su labor perseverante. No es la fortuna companera obligada del sabio 4 su paso por el mundo, y verdadera carrera de sacrificios es la vida de mu- chos. Los escritos del insigne Loscos argumentarian en pro de esta tesis, si no fuera innecesaria la defensa de tan triste verdad, que también podia comprobarse, recordando lo que 38 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (8) fueron aquellos dos botanicos Ultimamente citados, y la pro- teccién sin tasa que hubo de dispensarles Solano, que los res- petaba y queria como fieles representantes de una raza labo- riosa, servidores de la ciencia, que tuvieron por ideales la verdad y el bien, acomodando 4 tales principios todos sus actos. Mientras vivid conservo en su laboratorio, nuestro llorado Presidente, el retrato de D. Pascual Alvarez, su companero inseparable, y cuantos le conocimos, fino, sonriente, bonda- doso, sabiendo y practicando 4 macha martillo las ciencias de Linneo y de Bercelius, pero con la mirada en lo porvenir que tan grandes conquistas ofrecia, se cree verle preparando una leccidn de Quimica experimental, dirigiendo las plan- taciones y colectas de nuestro Botanico, 6 clasificando los minerales del Museo. La letra de mano temblona que atin se puede ver en las rotulatas de nuestra Facultad, y las citas que de sus herborizaciones hizo Loscos, es lo tinico que resta de tan modesto profesor. No queda mucho mas del que mejor conocia la flora de Huesca, por haber recorrido sus llanos y alturas buscando alivio para sus penas en los goces que la naturaleza proporciona al que con fe la interroga. Si la Facul- tad de Ciencias de Zaragoza no hubiera proporcionado auxilio eweneroso 4 D. Custodio del Campo, en la miseria y el aban- dono muriera el hombre singular, cuya memoria recomendaba ‘A todos Loscos diciendo de él, «que en solos dos anos le habia »remitido mas de 900 plantas fanerdgamas y criptdgamas »bellamente preparadas en flor y fruto figurando eutre ellas la Silene Campo? que eternamente recordara su nombre. A nadie extranara, después de cuanto queda dicho, que al catedratico de Quimica general de la Facultad de Ciencias le fuesen familiares los conocimientos botanicos. Si pudieran re- ferirse los trabajos pacientisimos 4 que dedicdé los ultimos anos de su vida, se comprenderia con cuanta razon el emi- nente Dr. Hanssen, de Copenhague, deplora la muerte del pro- fesor espanol que en 1893 planteaba en el laboratorio de Cals- berg problemas de verdadero interés para nuestra vinicultura, cuya solucién quiza proporcionen algtin dia los seres mas hu- mildes de las clasificaciones fitologicas, las levaduras, que él cultivaba y reproducia con el conocimiento y el cuidado que por su naturaleza exigen. ——— ee 9) Jimeno.—pD. BRUNO SOLANO TORRES. 39 (Juiso mi pluma, ganosa de corresponder a los deseos de esta Sociedad hacer un retrato, y escasamente ha sabido sefalar los contornos del original, sin conseguir revelar el espiritu que lo ennoblecia y animaba. Todos los grandes ideales tuvieron en el Dr. Solano admira- (lor apasionado, y ninguna verdad fué ajena para su cultivado entendimiento. Vivid para la Ciencia, dedicandola sus mas puras aspiraciones, y a semejanza de aquellos hombres de la antigiiedad que nacieron para enaltecer el concepto de la sabi- duria, puso todos sus anhelos en una obra de tanta grandeza como abnegacion. Deseo que el lustre de la Universidad de Zaragoza igualase al nombre de la Salmantina 6 de tantas otras que fueron un tiempo oraculos del saber, y en el laboratorio y en la catedra, 10s lego el ejemplo de como se debe trabajar por los prestigios de la ensenanza, que son, en definitiva, los de la patria. a? ‘gay pets ? y sil ¥ ‘ bia %¢ .aP ve Pdonnt) eo!) Sofuaved 0kt0, OEM alee aD Di if EC er ay i! a Tee hp a ce faa .. “ae nH lit one neath t bin GULL > Ape aby heat 4 mine aye SY sort. oly Bam! opto y pay berinty (ee & ‘ca pertnit} Ne rrrres (110"% CUNY Gar Oi oy ea wiital 41 | lps a, eins huh) Both ee. eA, | Dafairt anh wh baht wy vig, ot Aaa al aie i iverysigh Ad pf Reto ahi ag "i th Ro eno Loe al ahs wae are cut hany nl he nhtolaod al fy yy, iM Mae iin ae ( ah Wylie met 20: Hip 10 ivan nudbafe ya engi aL 1b Ti 49 ie, eA BI nth Bae andar NH Hie BOY Shy mee by L = = a ay var mp ti ) ss +e care | 99, 9 port Ae) UP oN ‘a + ie eae ww Wa a * a, i f , cag J “wt F hypee 4 Aeon um ile \ Bava aly Ua : RC..2 oe Tiare shh ie we : ; a: . ! nen - Lio’ te hate Ae vs = 7 ‘ 7 A Ss ) » 7% i» : a , ne% ) mi :. oe a re ee wih thi ‘ : | _ 7 : : ‘ med Fe) , : : | ae: i : ; : : +) ees oT ae ; a4 1) «f@ j a i) Sorte eet een China Buy 5.5. Tibiee postice spinis longitudine alternantibus. (Excepto genere Morsea.) Species americane.... EKumastaces. 6. Fastigium verticis inter oculos angustissimum, haud pro- ductum. 7. Elytra hyalina, regulariter reticulata; ale hyaline, haud colorate...... oswecrectna soem Gels ete) SEOMB LG meee o 7.7. Elytra opaca, colorata, conferte vel irregulariter reticu- lata. Ale colorate................. Paramastax Bm’. 6.6. Fastigium verticis eines minus productum. 21) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 05 7. Spine tibiarum posticarum longitudine alternantibus.... . «: Sale aetanat apie bere oFameA cestode! ke Bihar Ec .. Masyntes Aarsch. 7.7. Spine tibiarum posticarum longitudine wquantibus...... aicitte enc ents elte tan sites wen mene cures) MLOPSEA, OS CUAK: 4.4. Pedes minus graciles; tibiz antice inermes vel hirsute. Species africane et madagasse.......... Thericleis. 5. Fastigium verticis valde productum, cum fronte angulum acutum eficiens. 6. Statura gracili. Pronotum postice excisum. Penichrotes X. 6.6. Statura minus gracili. Pronotum postice truncatum. 7. Hlytra ‘et ale perfecte explicata......... Cymatopsygma A. fad, lytre et alas miles. .sw.s cs cess Pseudothericles Bui’. 5.5. Fastigium verticis haud productum, in costam frontalem rotundato transiens. 6. Femora antica superne anguste et profunde sulcata. Spe- cles apterw. Femora postica carina discoidali tantum denticulata. /. Pronotum postice .emarginatum.........< Symbellia Ba77. 7.7. Pronotum postice truncatum. 8. Vertex inter oculos angustissimus, carinulis contiguis.... Sakis Gis ceaslee sha Mls sisteg Moai palnets dau sc “MMOCLICICS! S200. 8.8. Vertex inter oculos minus angustus, carinulis distanti- IUD SeAralate7 eis sto av ose ae gla cele sage SE AVALNeLICLeS: HiL77-. ).6. Femora antica superne haud sulcata. Elytra et ale rudi- mentarize. Femora postica carinis 3 dorsalibus denti- culatis. Femora antica compressa, carinis 4 instructa. —, ~) 8. Vertex horizontaliter productus.......... Macromastax A’. Soh. Vertex ascendenser. tein. 02.8% Sa Sees eae .. Peedes £. 7.7. Femora antica carina media unica elevata, ale rotun- EP so sedk tae oe Pee elets orto wos... Buschmidtia £. CHORGTYPI. Les Choretypi sont caractérisés par la forme du pronotum qui est élevé en haut, comme chez certains Tettigides et Mem- bracides. Le genre Choretypus Serv. West quune forme bien développé du genre “Zrianthus Stal, qui possede en commun avec lui le front aplati et le pronotum plus ou moins élevé, ainsi que armature du metatarse postérieur. 96 ANALES DE HISTORIA NATURAL, : (22) 1. Genus Chorecetypus Serville. Serv. 1839. Orth. 751. (7920 chorus; 7579s.) Brunner a déja traité ce genre, mais cet illustre orthopte- riste a pris pour caractére spécifique absence ou la présence de petits miroirs «hypertéliques» au pronotum. Suivant ce cri- tére, il faut diviser Choretypus fenestratus Serv. en deux, et c’est la forme sans les miroirs que Brunner a déterminé comme Ch. gallinaceus (Fabr.) Mais apres l’examen de plusieurs exem- plaires, je n’ai pu trouver aucun autre point de majeure dif- férence. Ainsi, je réunis le ga//inaceus de Brunner a son /enestratus, comme le vrai Choretypus fenestratus Serville. Cest le Ch. monachus de Brunner que j’appelle gallinaceus, d’apres de Haan. Or, Brunner a bien raison en divisant le Ch. gallinaceus de Haan en quatre especes, quoique ce ne soit sans hésitation que je donne ason Ch. mutilatus le rang d’une espéce valable. Choretypus Serville de Haan, Brunner, Karsch. Phyllochoreia Westw. Walk. Typus generis, Choretlypus fenestratus Serville. Dispositio specierum. 1. Crista pronoti antice acuminata. 2. Pronotum supra usque ad apicem eequaliter rotundatum.. bps Bs ts tian ahafahic RECs ..... l. fenestratus Serr. 2.2. Pronotum supra emarginatum vel sinuatum. 3. Pronotum supra tertia parte leviter sinuatum. 2. Haani B7. 3.3. Pronotum supra emarginatum. 4. Pronotum supra ante medium atque pone medium emargi- NACUM 06... eels «ae ceevieeniiee io. DION ARP Ina DIS ae . 4. Pronotum supra ante medium rotundatum, atque pone medium emarginatum.... ij. s2-5.. . 4. pusillus B27, . 1. Crista pronoti supra verticem elevata. cs _— 2. Crista pronoti summo apice rotundato, postice in lobum attenuatum, acuminatum terminata. 5. gallinaceus /’. 2. 2. Crista pronoti summo apice acuto, postice in lobum atte- nuatum, apice truncatum, terminata. 6. mutilatus 27, (23 Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 97 1. Chorcetypus fenestratus Sv. Choretypus fenestratus Serv. 1839. Orth. 753. et auct. Karsch. 1888. Ent. Nach. xv, 8.—Br. Orth. Mal. Arch. 217. 1898. Choretypus gallinaceus Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 216. Phyllochoreia fenestrata Walk. 1870. Cat. Derm. iv, 797. Acridium (Choretypus) fenestratum de Haan. 1842. Verh. etc. 164. (excl. tab.) Patria? Bengal (Serv.) Borneo, Sakoembang (de Haan). Borneo, Kina Balu (Br. c. m.) Perak (c. m.) Serville signale cette espece de Bengal, mais c’est la seule citation connue de Ch. fenestratus provenant de l'Inde. Tous les auteurs le signalent de Borneo, Perak, etc. Brunner dit (op. cit., p. 217, nota): «Das mir vorliegende Exemplar aus Bor- neo stimmt vollkommen mit der von Serville gegebenen Dia- onose, allein der Fundort erweckt Zweifel.» 2. Chorocetypus Haani 8&7. Acridium (Choretypus) fenestratum de Haan. 1842. Tab. 22, fig. 4. Choretypus Haani Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 218. ParrniA. Borneo (de Haan). 3. Choroetypus biemarginatus £7. Acridium (Choretypus) gallinaceum de Haan. 1842. Verh. etc. Tab. 22, fig. 6. Choretypus biemarginatus Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 218. Patria. Java (de Haan). 4. Chorcetypus pusillus Br. Chovetypus pusillus Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 219. Patria. Malang, in ins. Java (Br.) (Bol.). >. Choroetypus gallinaceus (//7.). frryllus gallinaceus Faby. 1793. Ent. Syst. 1, 48. ANALES DE HIST. NAT.—X\XVIIIL. q 98 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (24) Acridium (Chorelypus) gallinaceum de Haan. 1842. Verh. etc. Tab. 22, fig. 5. Choratypus monachus Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 219.— nec Ch. gallinaceus Br. op. cit. ParriaA. Brunei, in ins. Borneo (de Haan). Malang, in ins. Java (Br.) Labuan, British North Borneo; Kina Balu, in ins. Borneo (c. m.) Nias (Mus. Brit. N° 83-25). 6. Chorcetypus mutilatus #7. Acridium (Choretypus) gallinaceum de Haan. 1842. Verh. etc. Tab. 22., hea. Choretypus mutilatus Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 219. Patria. Borneo, ad flumen Baram (Kiik.) Java (de Haan, Brunner). Comme j’ai déja dit, j’é@prouve quelque doute a regarder cette espece comme valable. Brunner dit quw’il est impossible quelle puisse étre la larve de Ch. gallinaceus, suivant la forme du pronotum, mais il est bien probable que. comme chez les Tetliz, cette forme se change pendant la vie, et se montre plus grande et plus développée chez les adultes. 2. Genus Phyllochoreia Jest. A Choretypo differt, elytris apice haud oblique truncatis, tibiis posticis haud lobatis. Phyllochoreia Westw. 1839. Charlesworth’s Magasine of Nat. Hist. 1, p. 495. Choretypus Brunner. srunner range la seule espéce de ce genre dans Chorelypus, mais je crois que les caractéres cités suffisent pour la séparer. Species unica. 1. Phyllochoreia unicolor JVestw. Phyllochoreia wnicolor Westw. 1839. op. et loc. cit. Karsch. 1888. Ent. Nach. xv, 9. (1) Voir ’Appendix. (25) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 99 Choretypus unicolor Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 219. ParriaA. Malabar (Westw. type dans la coll. Hope a Oxford). (Brit. Mus.) Westwood donne une description et un dessin. Brunner aussi donne une diagnose. 3. GENUS Sceirtotypus Brunner. (strotaw SALTO.) Brunner, 1898. Orth. Mal. Arch. 220. Dans ce genre je range le Choretypus curlithoragz Karsch, et une espéce nouvelle de Ceylan. Dispositio specierum. 1. Lobi tibiarum posticarum denticulati. Pronotum acie supe- riori valde sinuatum, sed non emarginatum. (Species borneensis; fastigium verticis haud valde decurvum). Oe em cis es pada ok shew Gh oe Sree Kies 1. aberrans £7. 1.1. Lobi tibiarum posticarum haud denticulati. Pronotum acie superiori emarginatum. 2. Species africana. Fastigium verticis sat decurvum. Prono- tum acie superiori antice minus, postice plus, emargi- MAG Whers.crcts Ms ia Stee ewes ver sun a CUlUlLNOTEx i. 2.2. Species sesloniton, Pesan verticis haud decurvum. Pronotum acie superiori antice haud, postice valde emarginatum....... sts A aga miaed Cie Mls 2 3. Greeni n. Scirtotypus aberrans £7. Scirtotypus aberrans Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 220, fig. 27. Patria. Kina Balu, in ins. Borneo (Brunner). Typus generis. 2. Scirtotypus curtithorax /Kursch). «Ochraceus, fusco-variegatus, interdum vitta per latera fron- tis pronotique ducta vittaque longitudinali lata dorsali abdo- minis nec non apice elytrorum albidis. Fastigium frontis late 100 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (26) truncatum. Pronotum minus amplum, antice parum, postice paullo productum, acie dorsali parte postica longitudinaliter emarginata, parte antica undulata. Femora omnia fortiter foliaceo-dilatata; tibize posticee curvate, superne prope basin acute lobate; margo externus dorsalis articuli tarsalis primi pedum posticorum denticulis quatuor vel sex armatus. Elytra angusta. Alze elytra paullo superantia. Long. corp. 30; aciei pronoti 7,2; altitudo maxima pronoti 9. Long. elytrorum 22; femorum posticorum 15 mill. (Fig. 2.) Der erste echte Chorelypus Afrika’s denn der ost-afrikanis— che Choretypus hippiscus Gerst. kann nicht bei Choretypus Serv. verbleiben, sondern bildet eine selbstandige, sehr ab- weichende Gattung Plagiotriptus ; bei Aufstellung dieser Gat- tung (Ent. Nach. xv, 1891, p. 8) liess ich mir eine leicht mis— szuverstehende Ungenauigkeit zu Schulden kommen; ich sagte dort, «Fliigel und Deckfliigel fehlen»: thatsachlich sind beider vorhanden, aber vollstindig verkiimmert und unter dem Pronotum versteckt.» ParriaA. Westafrika (Karsch). Une comparaison du dessin de Karsch de cette espece, mon- tre d'un coup d’eil qu’elle doit entrer dans ce genre. 3. Scirtotypus Greeni sp. n. Statura minore. Colore fusco. Fastigium verticis haud de- curvum, perpendiculare, apice truncatum. Pronotum com- pressum, valde cristatum, margine superiori antice obliquo, postice valde et profunde emarginatum, margine postico ipso acuminato, adunco. Elytra angusta, parallela, apice oblique truncata, basi fusca, dehinc hyalina, apicem versus infusca- ta, margine anali in parte apicali macula hyalina ornata. Ale elytris longiores, hyaline, apice caudate et infuscate. Femora omnia valde compressa, postica carina superiori denticulata; tibizee posticee subsinuate, lobate, lobis haud denticulatis, fusce, indistincte pallide-annulate, spinis pallide-variegatis armate. Abdomen compressum, carinatum. Cerci breves, co- nici, incurvi. Lamina subgenitalis brevis. ¢/. Long. corporis o” 9,75 mm. — pronoti 2,79 Altitudo — 4 (27) Malcolm Burr.— rESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 101 Long. elytrorum 10 mm. — femorum posticorum 9 Patria. Ceylan, Punduloya (Green, coll. m.). Type dans ma collection. Cette espece est dédiée au savant entomologiste, mon ami et collegue M. EK. E. Green, Ventomologiste de Vile de Ceylan. 4. Genus Orchetypus Brunner. (opyeicbar saltare.) Brunner, 1898. Orth. Mal. Arch. 220. 1. Orchetypus rotundatus 27. Orchetypus rotundatus Br. 1898. 1. ¢. Patria. Ins. Ceylan. (Brunner). Typus generis. 2. Orchetypus subtruncatus Brunner. Orchetypus subtruncatus Brunner. 1898, 1. ¢., fig. 28. Patria. Ceylan (Brunner), Punduloya, Hamhatta, Ceylan (Green. coll. m.). 5. Genus Plagiotriptus Awisch. Compressa. Frons perpendiculare plus minusve deplanata, medio sulcata; antenne brevissime; fastigium verticis inter antennas verticale, acutum. Pronotum magnum, cristato-ele- vatum, arcuatum, postice productum. Mesosternum margine antico rotundato; prosternum bilobatum. Elytra et alee abor- tiva, condita. Femora antica teretia, nec compressa nec dila- tata. Femora postica valde compressa, dilatata, carina supe- riore denticulata. Tibie omnes haud dilatate; metatarsus pos- ticus levis, haud denticulatus. Lamina subgenitalis obtusa. Valvule ovipositoris breves. Plagiotriptus Karsch. 1888. Ent. Nach. xv, 9. Brunner. Chorelypus Gerst. Ce genre singulier fut établi par Mr. Karsch pour une seule 102 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (28) espéce africaine. Il se distingue de Choretypus Serv. par les fémurs antérieures non comprimées, par labsence des org'a- nes du vol, et de la dilatation des tibias postérieures, et enfin par le métatarse postérieur non denticulé. Typus generis, Chorelypus hippiscus Gerst Dispositio specierum. 1. Frons deplanata. Colore pallide-testaceo. Pronotum longius quam altius, unicolor............. Be eee 8 ‘cee eae ae eee Sag ale hipnisens (Gerst.) 1.1. Frons convexa. Colore fusco-testaceo. Pronotum altius quam longius, maculatum............. «Sim wibiphaicaln Oe MEER Ore ee eee 2: Parenidinon ‘ale 1. Plagiotriptus hippiscus (Ge7s?/.) Unicolor testaceus (an viridis vivus?). Caput fronte medio sulcata, fastigio verticis acuminato, perpendiculari, oculis prominulis. Pronotum leve, antice supra caput paullo ascen- dens, acuminatum, superne arcuatum , regulariter curvatum, postice valde productum, acutum, testaceum, margine ipso superiore angustissime nigro, margine inferiore postice obli- que truncatum. Crura antica et intermedia teretia; tibize an- ticee et intermedi apicem versus infra margine interno 4, margine externo 2 spinulis minimis nigris, egre distinguen- dis, armatee. Femora postica valde dilatata, compressa, carina superiore nigro-denticulata; tibiz postice teretes, haud dila- tate, Superne utroque margine spinis apice nigris per totam longitudinem armat, calcaribus terminalibus, margine in- terno uno brevi, uno longiori, margine externo duobus brevi- bus armate. Tarsi inermes. Abdomem incurvum; valvule ovipositoris valide, superiores margine superiore denticu- late. 9 Long. corporis Q 21-23 mm. — pronoti 14-17,5 Altitudo — 11,5-12 Long. fem. post. 12-15 41) Voir Appendix (29) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACiDES. 103 Chorelypus hippiscus Gerst. 1873. Von der Decken’s Reisen in Ost-Afrika.. Dritter Band. Zw. Abth., p. 42, tab. 1, fig. 8. Plagiotriptus hippiscus WKarsch. 1888. Ent. Nach. xv, 10. Parrta. Mombasa (Gerst.) (Br. Coll. No. 15.814); Zanzibar (Coll. mea, Nos. 1.232, 1.233). Zomba, 2.000 a 3.000 pieds, Ndara in Africa orientali, Kilimandjaro, 400 a 600, Samburu en mai, Africa orientalis (Mus. Brit.) Kondoa, Zanzibar (Mus. Paris.) Cette espece est tres facile a déterminer, d’apres le dessin de Gerstecker. 2. Plagiotriptus rotundifrons sp. n. Parvus, fusco-testaceus. Caput magnum, fronte convexa, pallidum, rotundatum, oculis pallidis, prominulis; antenne pallide, apicem versus fusciores. Pronotum magnum, com- pressum, elevatum, altius quam latius, margine antico si- nuatum, carina superiore recta, retrorsum ascendens, mar- gine postico leviter curvatum, lobi deflexi maculis mediis duabus pallidis ornati. Elytra et ale nulla. Pedes breves, haud graciles. Femora postica incrassata, fusca, carina supe- riore pallida, denticulata, genubus atro-vittatis; tibiae postice fusco-testacezre, spinulis nigris armate, plus minus curvate, haud dilatate. Abdomen valde compressum, breve, lamina supraanali rotundata, valvulis ovipositoris minimis, denticu- latis, apice infuscatis. 9. Long. corp. 92 18mm. — pronoti 6 Alt. max. pron. 10 bone fem).-post:. 11,2 Patria. Mombassa. (Coll. Brunner, n° 16.712 type.) Cette espéce se distingue facilement par sa couleur foncée, et par la forme du pronotum. ERIANTHI. 6. Genus Erianthus §77/. Stal, 1876. Bidr. sédra Afr. Orth. Fauna O. V. A. F. 1876, n 3, p. 99. Typus generis Mastaxr gultatus Westwood. 104 ANALES DI HISTORIA NATURAL. (30). 1. Erianthus erectus Auarsch. Hrianthus erectus Karsch. 1889, Ent. Nach. xv, p. 29.—Brun- ner, 1898. Orth. Mal. Arch. 222, fig. 29. Parria. Ligao et Daraga, Albay, iles Philippines (Bolivar). Déja signalé a Luzon. Espece nouvelle. 8. Erianthus obtusus sp. n. Q. Fuscus. Fastigium verticis obtusum, haud reflexum. Pro- notum deplanatum, media carina subtili instructum postice rotundato-angulatum. Elytra angusta, castanea, apice albido- biguttata, Ale aurantiace, apice infumatee et albido-bigutta- te. Abdomen fuscum. Femora postica fusca, genubus valde acuminatis; tibie postice fusce, obsolete pallide-annulate. Valvule ovipositoris mediocres, valid. 9. Long’. corporis Q 31 mm. — pronoti 5) — elytrorum 24 — femorum posticorum 14 Patria. Labuan, British North Borneo (coll. m. ex coll. Swinhoe. Type). Cette espéce se distingue de defloratus par les élytres bimou- chetés, de versicolor par la couleur des ailes, et de guttatus par la forme du vertex. Cette espéce rentre dans le tableau de M. Brunner trés faci- » lement (op. cit.). 2’. Vertex apice obtusiusculus, haud reflexus. 3’. Ale nigra, pallide maculate.......... 5. lugubris Br. 3''. Ale hyaline, vel colorate, haud nigre. 4, Elytra haud maculata............... 6. defloratus Br. 4’. Elytra bimaculata. 5. Alee griseo-inflate........ icceccues 7. WORSIGOLOE 27". 5’. Alee aurantiace, apice infumate et bimaculate........ nc Pe On a's avileta's ciabintln stats “ORULISIRE: Sanat (31) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 105 7. Genus Adrapetes Karsch. «Vertice convexo, fastigio depresso, antrorsum valde pro- ducto, costa frontali infra antennas non continuata, supra an- tennas latissima, inter ocellos autem, subito valde coarctata, Pedibus longis, gracilibus; femoribus anticis subtus sulcatis, margine externo alto, serrato, dente preeapicali instructo; ar- ticulo tarsorum posticorum primo elongato, supra sulcato, marginato, marginibus ambobus dentatis. Elytris alisque nullis.» Je ne connais ce genre que par la diagnose de M. Karsch. Suivant lui, il est trés voisin d’ #rianthus Stal; ila, comme ce genre, les pattes longues et gréles, le métatarse postérieur denticulé au bord extérieur, le vertex plat, long, et courbeé, les antennes plattes en dessous, la face sans carénes ou sillons, les tibias antérieures au bord inférieur sillonées, a la dent apicale. Il se distingue d’#7iauthus par Vabsence totale des organes du vol, au moins chez les femelles, le seul sexe connu jusqwici, par le vertex é¢minent en avant, et non pas élevé en haut, par la forme du pronotum. De Mnesicles, il se distingue par les pattes gréles, aux tarses antérieurs long's et eréles, par les antennes plattes en dessous, par la face sans carenes, par l’absence entiére des organes du vol. 1. Adrapetes serraticrus Avursch. «Brunneo-flavidus, opacus, pedibus flavis, apice femorum posticorum infuscato, carinis dorsalibus tribus femorum pos- ticorum nigris. Pronotum margine postico truncato non pro- ducto, medio subcarinatum, carina postice paullo elevata, lobis lateralibus angulo postico rotundato.» 9. Long’. corporis Q 22,5 mm. — femorum posticorum 12,5 Adrapetes serraticrus Karsch. 1889. Ent. Nach. xv, 29. Patria. Segaar Bay, Nouvelle Guinée (Karsch). (Typus in Mus. Berol.) «Kopf hoch; Gesicht flach, zuriickweichend; die dicht un- terhalb der Fiihlerbasen abschliessende Stirnleiste nimmt fast 106 ANALES DE HISTORIA NATURAL. ' (32) die ganze Stirnbreite ein, ist flach und nur zwischen den Ocellen stark eingeschniirt; Scheitel stark gewélbt und vorn in einen flachen, iiber die Augen weit hinaus vorragenden spitzen, am Ende abgerundeten Fortsiitz ausgezogen; Prono- tum etwas comprimirt, die Riickenmitte der Lange nach worn und hinten kielartig vorstehend, daher auf der Flache schwach concay; Seitenlappen gewolbt, kérnig gerunzelt, mit geraden Aussenrande und gerundet in die Seiten tibergehendem Vor- der und Hinterwinkel; Hinterschenkel die Spitze de Leges- cheide beinahe erreichend; Hinterschienen am obern Aussen- rande mit kurzen gleich langen, am oben Innrande mit abwechselnd lingern und kurzen schwartzen Stacheln; vor- derstes Glied der Hintertarsen oben am ganzen Innenrande sigezihnig, am Aussenrande mit nur einem ziemlich star- ken Mittelzahne und naher der Spitze mit drei starken Zahnen bewehrt.» 8. Genus Eupatrides Brunner. (Zunatordy¢ NObT/is.) Brunner. 1898. Orth. Mal. Arch. 230, fig. 33. Eupatrides Brunner. Mastaxr de Haan. Typus generis, Acridium (Mastar) cyclopterum de Haan. Rien a ajouter. 9. Genus Bennia (!) Burr. A genere Hupatridi differt, alis ut in genere J/astace forma- tis, haud cycloideis. 1. Bennia innotata (JIa/h.) Vertex horizontaliter productus, acuminatus. Pronotum ut in Mast/ace. Vlytra apice rotundata; ale oblong, typice, im- maculate; elytra et ale hyaline. Abdomen fuscum. Pedes graciles, fusci..... sexus ? (1) «Vox sensu carens.» (33) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. ~~ 107 Mastaz innotata Walk. 1871. Cat. Derm. Salt. Suppl. v, 88. Patria. Yunan. (Walk. Brit. Mus. Type.) L’apex de l’'abdomen manque chez le seul exemplaire que je connaisse, le type de Walker, qui est en trés mauvais état. GOMPHOMASTACES. 10. Genus Gomphomastax Brimnier. (youbo: Clavus.) Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 232. Gomphomastaz Brunner. 1898. op. et loc. cit. Parerucius Krauss, in Zubowsky. 1898. Acrid. Asiat. Russ. 4] (108). Ce genre fort curieux était établi par Brunner dans un ou- vrage qui a apparu pendant le printemps, dont j’ai vu un exemplaire au commencement du mois de Mai. Au contraire, VPouvrage de Zubowsky porte la note «Imprimé, Juin 1898.» C’est donc le premier nom qu'il faut garder. . Le genre est bien caractérisé par Brunner et aussi par Krauss. C'est le seul genre des Humastacides dont la distribution s'étend jusqu’au bord de la région palearctique. Les antennes longues et renfiées au bout le distinguent dun coup d’e@il de tous les autres genres de la tribu. Typus generis, Gomphomastar antennatus Brunner. Dispositio specierum. 1. Antenne corporis medium quantes vel superantes. Pro- notum plus minus constrictum. 2. Antenne <7 corporis longitudine, apice clavate. Species MASCUINITICA: iG oo San rn ee eens ..- 1. antennata 47. 2.2. Antenne © corporis medium vix superantes, apice sen- sim dilatatw. Species punjabica.... 2. constricta Br. 1.1. Antenne femora antica squantes, vel illis longiores, longitudinem autem dimidiam corporis haud supe- rantes. Pronotum cylindricum. 2, Antenne < capite et pronoto unitis plus duplo longiores, 108 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (34y in © illis unitis sesquilongiores. Vertex arcuatim in costam frontalem transiens........ 3. Kraussi Bu7v. 2.2. Antenne <7 ignote, © capite et pronoto unitis brevio- res. Vertex sub angulo obtuso in costam frontalem fRANSIONS «|. 2). wate APS Rc: se cobsdee” OP RCH 1. Gomphomastax antennata Brunner. Gomphomastax antennata Br. 1898. Orth. Mal. Arch. 232, fio. 34. PATRIA. Kaschmir (Br.) 2. Gomphomastax constricta £7. Gomphomastax constricta Br. 1898. op. cit. 233. Parria. Pundjab (Br.) 3. Gomphomastax Kraussi wor. nom. Parerucius antennatus Krauss, apud Zub. Acrid. As. Russ. 1898. 42 (109). Patria. Verny, apud Semiretschje, in Asia centrali. 4. Gomphomastax opaca ( A7wuss.) Parerucius opacus Krauss, apud Zub. 1898. op. cit. 43 (110). ParriA. Podgorny, & Sasanovka, in Semiretschje, in Asia centrali. ERUCII. ll. Genus Erucius S7i/. Stal. 1875. Obs. Orth. Bih. K. Svensk. Vet. Ak. Hand. m1, n° 4, p. 136. Erucius Stal, Karsch, Brunner. Mastaz de Haan, Westwood. Malgré le petit nombre d’espéces de ce genre, il est assez difficile d’établir un tableau synoptique. J’ai suivi Brunner, et a son systeme j'ai ajouté deux espéces, l’une décrite par M. Bolivar, l'autre par moi-méme. 485) Malcolm Burr.— mssAI SUR LES EUMASTACIDES. 109 Dispositio specierum. 1. Femora postica fusca vel nigra, variegata. 2. Femora postica fusca, superne leviter fusco-vittata. Lamina subgenitalis apice truncata. 3. Elytra cum alis apice nigro-fasciata. 1. apicalis ( Westi.) 3. 3. Elytra cum alis tota hyalina...... 2. vitreus (Westiv.) 2.2. Femora postica nigra, pallide variegata. 3. Femora postica basi nigra, apice pallida......... Mothers sien Bee Sra dstaun face itlae avi eslora. deer. Son CEG UIOR a0) 3. 3. Femora postica nigra, superne pallide 4-vittata. (Lamina subgenitalis apice acuminata.) 4. Elytra apicem abdominis superantia, vitrea, apice late nigro-vittata necnon interdum fascia altera nigra obli- Ua ORME Cakaiets stele esi nels ...... 4. bifasciatus S7a/. 4. 4. Elytra apicem abdominis haud attingentia, in apice ipso hyalina et plus minus distincte fusco-bifasciata Bette Misiaa reece edie tale a eatslaies ican Os Javanus, Mm: 3. Erucius dimidiatipes Bo/. Colore cinereo-fusco. Fastigium verticis marginibus subre- flexis. Antenne articulo primo cinereo excepto nigree. Prono- tum postice rotundato-angulato-productum, antice valde an- gustatum, dorso nigro ruguloso. Carina media modice elevata; lobis deflexis cinereis, subtus plaga nigra; angulo postico recto. Elytra apicem femorum quarta parte superantia, apicem ver- sus sensim ampliata, sublactea, nigro reticulata, area analis basi grosse impresso-punctata. Pedes gracili, elongati. Femora postica pallida dimidio apicali nigro. Tibizw posticee fuscee, in- tus, preter spinam apicalem spinis 17 ineequalibus armata. Abdomen pallidum, nigro ornatum <7 apice nigro, valde cla- vatum o. Long. corp. 20 mill.; pron. 2,5 mill.; elytr. 22 mill.; fem. post. 12 mill. Sumatra E. Modigliani. 110 ‘-ANALES DE HISTORIA NATURAL. ‘ (36) ELrucius dimidiatipes Bolivar. 1898. Ann. Mus. Civ. Gen. (2) m1x, 82. Parra. Sumatra, Si-Rambé x, 1890, m1, 91. E. Modigliani (Bol.) Sumatra. (Mus. Brit., n° 79-55.) 6. Erucius javanus sp. n. Statura minore. Pronotum supra fuscum, lobis defiexis pal- lidis. Elytra angusta, pallida, apice fusco-bivittata, venis ra- dialibus infuscatis; alee hyaline, abdomen superantes. Abdo- men pallidum, fusco-variegatum. Pedes testacei, fusco-varie- gati; valvule ovipositoris long, crenulate. Lamina supra- analis in lobum obtusum brevem producta. c 9. Long. corporis o 12,5mm. 9 19mm. — elytrorum 1] 12 — femorum posticorum 1] 14 Parria. Java. (Typus in Mus. Brit. 93-64, coll. mea, nu- méro 1230.) 12. Genus Mnesicles S/i/. Mnesicles Stal. 1877. Orth. Phil. Ofv. Vet. K. Ak. Férh. N° 10, p. 54. Karsch, Brunner. Typus generis Mnesicles modestus Stal. Une espéce a ajouter. Mnesicles strigatus Bo/. Fusco-rufescens. Fastigium capitis ante oculos levissime productum circumcirca marginatum, antice truncatum. Frons deplanata, sulco coste frontalis medio amplato et antice ab- breviato. Antennee rufescentes. Oculi fusco-lineati. Pronotum subcylindricum, rugulosum, antice truncatum, fere arcuatim exciso, postice rotundatum; linea media elevata versus mar- ginem anticum subevanescente; lobis deflexis longioribus quam altioribus, angulo antico rotundato, angulo postico rec- to, margine inferno medio subsinuato? Elytra angustissima, apicem femorum superantia, apice obtuse angulato-subrotun- data, grisea, fusco-venosa, apicem.versus areolis infuscatis. ae (87) Malcolm Burr.—rSSAI SUR LES EUMASTACIDES. 1 Ale vitreee, dilute nebulosee. Thoracis lateribus confertissime strigatis. Pedes compressi. Femora postica supra minute ser- rulata, Valvulee ovipositoris dentibus paucis sed robustis apice obtusatis armate. Q. Long. corp. 29.mm.; pron. 3,8 mm; elytr. 19 mm.; fem. post. 14 mm. Mentawei Sipora Sereinu v, vi, 1894. EK. Modigliani Museo Civico di Genova. Cest la plus grande espéce du genre; elle différe en outre du VW. modestus Stal et du crassipes Karsch par la couleur du corps et par la grandeur des ailes. Je n’ai vu qu’un seul exem- plaire qui devait étre sans doute décoloreé. Mnesicles strigatus Bol. 1898. Ann. Mus. Civ. Gen. (2), xix, p. 82. 13. Genus Mastacides Bo/. gen. nov. ii Jit. Statura parva. Costa frontalis inter antennas angustissima, sulecata; fastigium verticis nondum minime elevatum; frons reclinata; antenne breves; oculi magni, globosi. Pronotum parvum, deplanatum, carinula media subtilissima carinis la- teralibus nullis instructum, antice truncatum, postice paullo emarginatum; lobi deflexi angulo antico rotundato, postico rectangulo. Elytra rudimentaria, minima; ale nulle. Femora omnia incrassata; tibic antice et intermediw apice subtus utrinque spinulis tribus minimis armate; femora postica ca- rina discoidali necnon interiori spinulosa; metatarsus posti- cus in margine externo spinulosus. Abdomen cylindricum, dorso carinatum, apicem versus attenuatum, segmentum ul- timnum magnum, ampliatum; lamina subgenitalis magna for- nicata; lamina supraanalis lobata. Mastacides Bolivar in itt. Typus generis, Wastacides pupeformis Bol. Dispositio specierum. 1. Lamina supraanalis utrinque lobo singulo armata; carinée verticis minime elevate....... 1. pupzeformis Bo/. 1.1. Lamina supraanalis utrinque lobis binis armata; carinee verticis haud elevate............ 2. pterolepis Bo/. {12 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (38) 1. Mastacides pupeeformis Bo/. a Viridis; pubescens. Carine verticis minime inter oculos elevate. Oculi nigri. Cerci egre distinguendi, incurvi, apice mucronati; lamina supraanalis lobo longo, recto, singulo utrinque armata, cercorum speciem formantibus; lamina sub- genitalis magna, fornicata, mutica. Long. corporis oO 13,5 mm. — pronoti 2 — femorum posticorum i) Mastacides pupeformis Bolivar. MS. Patria. India meridionalis (Bolivar). 2. Mastacides pterolepis £o/. o¢ Fusco-testaceus (an viridis vivus?). Carine verticis haud elevatae. Lamina supraanalis utrinque in lobos binos produc- ta, quorum alter major, alter minor; lamina subgenitalis magna, fornicata, margine superiore (postico) plus minus acuminata, apice spinulis duabus nigris, retrorsum decurvis armata. Long’. corporis of 14mm. — pronoti 2 — femorum posticorum 9 Mastacides pterolepis Bolivar. MS. ParrtA. India meridionalis (Bolivar). ENSAYO DE FISIOLOG{A MINERAL. Se Ob a@, SOBRE LAS PSEUDOMORFOSIS DE PROCESO QUIMICO, POR DON FEDERICO CHAVES. (Sesién del 6 de Noviembre de 1895. ) El papel que los minerales desempenan como elementos activos en el organismo del globo puede ser examinado bajo dos diferentes aspectos: uno estatico y otro dinamico. Un mi- neral ya formado y no sujeto actualmente 4 cambios substan- ciales desempena un papel estatico. Ha absorbido, digamoslo asi, una determinada cantidad de energia que no puede poner en juego sin la intervencidn de procesos dinamicos especia- les. Es un sistema en equilibrio incapaz de modificarse sino merced 4 una energia externa. Por el contrario, un mineral en evolucioén ofrece una fase dinamica, porque las energias acumuladas durante la fase estatica precedente reaparecen, y a las modificaciones habidas en estas energias se debe su actividad en el concierto de los mutuos cambios que se verifi- can entre los materiales pétreos que componen el globo. Desde el momento en que el mineral se manifiesta como elemento dinamico de nuestro planeta, mantiene multiples relaciones con el medio, y sufre una serie de transformaciones, una sucesién de cambios muy exactamente comparables 4 las que en el sér vivo provocan las relaciones con el medio en que se desarrolla y vive. Y si se trata de poner en parangén la ANALES DE HIST. NAT,— XXVIII. 8 14 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (2) evolucién organica con la evoluciOn mineral, forzoso es reco- nocer que los minerales son al reino inorganico lo que los ani- males y las plantas al reino de los seres vivos, por cuanto la actividad vital, sello de la existencia organica, esta represen- tada en el mineral por los cambios de substancia con el medio que le rodea, cambios fatalmente acompanados de manifesta- ciones dinamicas inherentes al conflicto de las energias. La interrupcidn mas 6 menos prolongada de estos cambios acusa una pausa en la actividad mineral comparable en un todo a la que el sér vivo experimenta cuando la muerte interrumpe las relaciones entre su substancia y la del medio ambiente en que se desarrolla, cuando se rompe «la adaptacién continua de las acciones internas a las externas.» En este concepto, exclusivamente bioldgico, interesa direc- tamente al mineralogista el conocimiento de las acciones reci- procas de las materias pétreas, tanto desde el punto de vista substancial, cuanto por lo que a los mutuos cambios de la ener- gia en todas sus manifestaciones se refiere, por la misma ra- zon que al bidlogo interesan no solamente los cambios subs- tanciales que en el seno de los érganos y tejidos radican, y entre el sér organizado y el medio en que vive se establecen, sino también y muy especialmente las mutuas transformacio- nes que sufre la energia puesta en juego desde que la vida comienza hasta que cesa. El conocimiento de éstas es de capi- tal interés para juz@ar acerca de la naturaleza é intensidad de los agentes capaces de operar dichas transformaciones. El estudio llamado mas directamente a arrojar luz sobre la cuestidn aqui bosquejada es el de las pseudomorfosis. Corres- ponden éstas a fases evolutivas de la vida mineral y nos mues- tran procesos naturales interesantisimos, revelando a veces circunstancias especiales que en ellos concurren. Este estudio constituye el asunto del presente trabajo. Pseudomorfosis quiere decir «conformacion falsa», y en tal concepto, basado en las relaciones entre la composicién de los minerales y la forma cristalina, seran objeto de nuestro estu- dio las alteraciones que sufren los minerales cristalizados para cambiarse en otros conservando la forma y, en ciertos casos, la estructura primitiva. No quiere decir ésto que los minerales amorfos dejen de estar sujetos 4 las mismas modificaciones que los cristalizados; pero como la forma cristalina de un mi- (8) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 1i5 neral es testigo fidelisimo de la historia de su pasado, halla- remos la prueba mas evidente de las alteraciones de que ha sido objeto en la incompatibilidad entre la forma cristalina que presenta y la composicién actual (1). Estas alteraciones estan expresadas en su minimum por el cambio de yéxero mi- neralégico, tomando esta palabra en la acepcidn admitida en la generalidad de las obras didacticas modernas. Desde hace tiempo se vienen estableciendo categorias dis- tintas en cuanto a la indole de las alteraciones producidas por pseudomorfismo, y las diferencias consignadas se han basado, ya en el cambio total de la substancia, ya en una alteracidn parcial de ésta (adiciodn, separacién 6 descomposicion, substi- tucion), ya en modificaciones de las propiedades fisicas sin cambio alguno substancial. Hé aqui la divisién @eneralmente adoptada en 1.2 Remociones: ») ( Pseudomorfosis de proceso qu‘maco: 3." Paramorfosis. Aceptando en prinzipio esta clasificacion, nosotros estudia- remos especialmente el segundo grupo, mas no sin hacer notar desde luego la posibilidad de incluir en él cierto numero de pseudomorfosis consideradas de ordinario como remociones. Ii] grupo de las pseudomorfosis de proceso quimico es el mas numeroso é importante para las investigaciones que co- rresponden a la Minerogenia. Comprende todas aquellas pseu- domorfosis en que se revela un proceso quimico mas 6 menos complejo, y por tanto las relaciones entre la combinacidn so- bre la cual se opera el cambio y la que resulta después de éste, merecen desde nuestro punto de vista singular atencion. La complexidad molecular de un mineral determina en el aspecto estatico la fase evolutiva por que atraviesa, mientras que en el aspecto dinamico, es decir, en el respecto de las energias que la combinacién dada puede poner en juego por la accién de los agentes modificantes, asi como de las modificaciones que estos mismos agentes introducen en su composicién, constitu- (1) Entiéndase que hacemos aqui una generalizaciOn en realidad ilicita, por cuan- to la variacion de forma cristalina, como es sabido de los cristalografos y quimicos, no implica nxecesariamente una modificacion en la composicidn. Diganlo los numerosos casos de polimorfismo. 116 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (4) ye la clave indispensable para el conocimiento de la naturaleza y magnitud de las energias que el mineral es capaz de movi- lizar 4 consecuencia de las alteraciones acaecidas durante el periodo de su actividad fisioldgica. La Mecanica quimica, que 4 nuestro juicio es la mas po- derosa palanca capaz de desentranar esas correlaciones de la energia en el mundo de los minerales, esta todavia en sus principios, pudiendo decirse que no ha traspasado los um- brales del laboratorio en el cual sélo se efectuan hoy por hoy los mas elementales y sencillos estudios relativos & substan- cias perfectamente conocidas, sin llegar mas alla, al ignoto campo en donde la naturaleza muestra las mas variadas for- mas de combinacidn; formas cuya composicion es hasta dudo- sa en muchos casos, y en consecuencia inabordables a un es- tudio emprendido de acuerdo con los principios de la Mecanica quimica. Digalo si no el notabilisimo contraste que ofrecen las determinaciones hechas respecto a la sintesis y descompo- sicién del agua, del acido clorhidrico, del amoniaco, del ozono, de numerosos Oxidos y sales metalicas, de combinaciones del carbono, con la ignorancia en que nos hallamos respecto al juego de las energias que concurren en la formacién y des- composicion de los silicatos, aun los mas sencillos que encon- tramos en el reino mineral. Si hemos de tomar como norma una de las mas fecundas direcciones en que se ha insinuado hoy la cuestidn, la direccién termoquimica, notaremos desde luego que las mas perspicaces indagaciones termoquimicas que 4 partir de Berthelot y Thomsen se han efectuado, se es- trellan contra sencillisimas combinaciones silicatadas. Ana- dese 4 ésto, desde el mismo punto de vista de la constitucién molecular de los minerales, la imposibilidad de aplicar las leyes de la cuantivalencia al estudio de la concatenacidn atdé- mica de combinaciones de composicién cualitativa desco- nocida. De estas breves consideraciones se deduce que en el estado actual de los conocimientos cientificos carecemos casi por completo de datos relativos 4 la medida de las energias que concurren en el funcionalismo de los minerales, no obstante conocer bien en muchos casos los cambios de substancia que lleva consigo la actividad de los mismos, asi como los agentes productores de estos cambios. (5) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 117 Si la actividad fisioldgica de los minerales se acusa inme- diatamente por modificaciones en la composicién y consti- tucidn quimicas, es evidente el interés de conocer éstas del modo mas completo posible. En tal respecto, los minerales deben ser considerados como combinaciones quimicas defini- das, en nada diferentes de las que se conocen y manejan en el laboratorio, y por consiguiente la primera cuestidn que se ofrece es la de su estructura molecular. La determinacién de esta estructura, que es de la exclusiva competencia del qui- mico, debe ser la base de todas las conjeturas sobre la fase evolutiva que una especie mineral representa, relativamente, claro esta, a la que otra determinada especie ofrezca. Si comparamos entre si la estructura de combinaciones mi- nerales bien conocidas, observaremos que cuando los elemen- tos que las constituyen tienen la misma cuantivalencia y en- tran en ntiimero igual de atomos, la estructura de esas mo- léculas es semejante. Tal sucede en los sulfuros 5: Pb S Cu S Fe S Hg en los sulfatos S 0, Ca S 0, Pb SO, Cu SO, Fe en los metasilicatos Si 0, Mg Si 0, Fe SiO, Ca en los ortosilicatos Si 0, Mey SUL OF om Si O, Zn, S10, Mn, en los polisilicatos (Si 0,), Al, Fe, KH (Si O,), Al, Mg, KH Sig Oe Alek Si, O,, Al, Ca Las combinaciones comprendidas en cada uno de estos gru- pos pertenecen al mismo molde 6 tipo de estructura, porque estan formadas por el mismo ntimero de atomos de igual cuantivalencia vy semejantemente enlazados. Estas combina- ciones no sufren alteracién en su estructura por la simple substitucién de uno de los atomos constituyentes por otro equivalente. Pero, en cambio, son numerosos los casos de adi- cién y substraccion 6 descomposicién que provocan modifica-— ciones notables, faciles de concebir en teoria, puesto que la separacion de un atomo polivalente de una molécula consti- 118 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (6) tuida con arregilo a las leyes de la cuantivalencia, trae consigo casi constantemente la destruccion del tipo primitivo. Una vez dirigida esta rapida ojeada a la estructura gene- ral de las combinaciones del reino mineral y a las modifica- ciones de que ésta es susceptible por virtud de los cambios quimicos, fijémonos un momento en la influencia que la com- posicion cualitativa, asi como también dicha estructura, ejer- cen sobre el papel minerogénico de las mismas. Comparemos, al efecto, las formulas desarrolladas de dos minerales, tales como el cuarzo y el caolin, que representamos por medio de los esquemas siguientes: OH | O 4 aps 24g J peor SI Siz x ae | | / OH YS OVO Ale 0 OH \ OH Del examen de estas formulas se desprende el diverso papel minerogenésico que las combinaciones representadas son sus- ceptibles de desempenar. Hay en primer lugar una diferencia cualitativa, por cuanto el caolin contiene aluminio de que ca- rece el cuarzo. De otro lado se comprende en seguida, teniendo presente la estructura ala par que el modo de descomposicion de los silicatos en general, que las acciones quimicas capaces de diseregar la molécula del caolin dan lugar inmediatamente ila separacién de silice, salvo reacciones mas complejas de combinacidn de ésta con nuevos elementos, separandose al mismo tiempo alumina (1). Vemos, por consiguiente, que el caolin, sobre contener los elementos de la silice y originarla mediante las acciones quimicas, une a la energia minerogé- nica de esta especie la propia de la alumina puesta en libertad. A las mismas deducciones llegariamos estudiando comparati- vamente la composicion y constitucién del silicato piroxénico SiO; Mg’ y la del silicato tremolitico Si, Oj Mg, Ca. Consideraciones analogas repetidas con las diversas espe- cies Iminerales nos permiten establecer, por lo que toca a las (1) Asi sucede en la practica, como se muestra por la igualdad: Caolin =» 2 Si O. + Al, O, + 2 H, O — (7) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 119 pseudomortfosis, tres categorias 6 modos distintos de altera- cidn de los minerales. Una de estas categorias comprende todas aquellas alteraciones en que los fendmenos quimicos habidos no son suficientes para modificar el tipo molecular primitivo. Comprende la segunda aquellas pseudomorfosis que acusan desde luego fendmenos quimicos progresivos, por cuya virtud el tipo molecular se modifica profundamente, haciéndose mas complejo mediante la introduccién de nuevos elementos. Y por ultimo, 4 la tercera categoria pertenecen las pseudomorfosis en que se manifiesta una alteracién notable del tipo molecular en virtud de la eliminacién de alguno 6 varios de los elementos constituyentes, determinando desde luego un proceso quimico regresivo. Dividimos, pues, las pseudomorfo- sis de proceso quimico del modo siguiente: Pseudomor/osts en que se conserva el tipo molecular primitivo.— Pseudomorfosis progresivas.—Pseudomor fosis regresivas. Una vez establecido asi el plan propuesto en este breve es— tudio, no pasaremos adelante sin fijarnos en una cuestién del Inayor interés que se relaciona directamente con la constitu- cidn de los silicatos. Nos referimos 4 la simultaneidad de reac- ciones distintas posibles mediante un agente quimico sobre la mezcla de silicatos diferentes constitutivos de una misma especie mineralogica. Un ejemplo servira para aclarar estas ideas. La broncita se considera como una mezcla isomorfa de los dos silicatos Si 0, Mg, Si 0, Fe, La alteracion que las aguas carbonicas producen en la bron- cita cambiandola en talco, pseudomorfosis frecuente en cier- tas rocas, obedecera a dos reacciones independientes analogas que tendran lugar, una sobre el silicato magnésico y otra so- bre el silicato ferroso de la broncita, que formularemos de este modo: \ Siz O; Mg) | (Si, O, Fe, \ pudiendo representarse la transformacién de la manera si- euiente : 2 llsin’ 0; Fes) 3460, H. 0—- (Si, 0, Fe, H,)+ CO, Fe 120 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (8) Esta interpretacion hecha respecto al talco se aplica igual- mente a los silicatos constituidos por mezclas de tipo molecu- lar diferente. : Resulta que en el estado actual de los conocimientos sobre la constitucién de los silicatos, hemos de limitar en muchos casos nuestras consideraciones a la fase evolutiva 6 modifica- ciones sufridas por determinada combinacion constituyente de una mezcla dada, sin poder establecer deducciones genera- les sobre ésta, ya que en sus alteraciones concurren a veces procesos de caracter opuesto, quimica y fisiol6gicamente con- siderados. Bien conocida es de los quimicos y mineralogistas la natu- raleza de las causas productoras de los fendmenos de pseudo- morfismo. Desde hace tiempo las experiencias del labora- torio han puesto fuera de duda que aquellas causas no son otras que las ordinarias capaces de provocar acciones quimi- cas; y es buena prueba de este aserto la reproduccion artificial de cierto nimero de pseudomorfosis obtenidas ya accidental- mente, ya con el fin preconcebido de conseguirlas (1). Pero, siquiera sea con la brevedad que este rapido bosquejo exige, conviene enumerar aqui las diversas experiencias efectuadas en el laboratorio con objeto de estudiar las alteraciones que los minerales sufren por la accidn de los diversos agentes, las cuales vendran a4 ser documentos de fe necesarios para inten- tar la sintesis de las alteraciones pseudomorficas de los mis- mos. Sera bueno recordar que las pseudomorfosis pueden ser producidas por las dos vias distintas que rigen en los procesos del globo, la via ignea y la via acuea, tantas veces concurren- tes. Mas los fendmenos conocidos de pseudomorfismo por via ignea, asi como los producidos por gases y vapores, son bas- tante limitados, bien que respecto a las acciones mutuas que entre los minerales se desenvuelven mediante la influencia del calor posean los petrografos considerable cumulo de datos y observaciones (2). Mn cambio existen numerosas pruebas (1) Entre las primeras experiencias encaminadas 4 la reproduccion de las pseudo- morfosis 6 realizadas casualmente merecen citarse las de Berzelius (conversion del hierro espético en pirita magnética) y las de Stein (conversién del yeso en calcita). Noticia de estas experiencias pueden adquirirse en Berzelius, Rapp. ann., 7¢ année, p. 174. (2) En la obra de Mineralogia del profesor Tschermak, se encuentra una extensa (9) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 121 respecto & las pseudomorfosis directas por via acuea. Por esto consideramos Util el examinar seguidamente aquellas expe- riencias que patentizan la eficacia de la accion del agua y de las soluciones acuosas como agentes quimicos de pseudo- morfismo. El agua, con el concurso de las sales y los gases que lleva en disolucion, es el agente pseudomorfico mas general. Ocu- pandose del origen y formacién de los yacimientos metalife- ros, Elie de Beaumont consideraba los filones como inmensos canales recorridos en otro tiempo por las aguas incrustantes, que son, ajuicio del ilustre sabio, el motor universal de las reacciones quimicas filonianas. Este proceso acueo-pseudo- morfico debe ser considerado, sin duda alguna, como el mas importante de los que intervienen en las acciones mutuas de los minerales, bien se verifique a la presidn ordinaria y a la temperatura del aire, bien vaya en muchos casos secundado por una presidn enérgica y una temperatura elevada capaces de influir notablemente en aquéllas. La intervencién del agua en el proceso que nos ocupa puede ser considerada bajo dos aspectos distintos correspondientes a las dos categorias de fendmenos que intervienen en las pseu- domorfosis, y que acusan, una acciOn puramente fisica, de un lado, y una accion de orden quimico, de otro. A la primera categoria se refiere el hecho primordial de la penetracion de los liquidos en la masa de los minerales, y con ellos la de las substancias activas que al estado sdlido 6 gaseo- so no serian capaces de reaccionar quimicamente. Sabido es que la higroscopicidad 6 imbibicidn que se manifiesta en ge- neral en todos los solidos sumergidos en una atmodsfera hume- da 6 banados por el agua alcanza proporciones considerables en ciertos minerales, como la hidrofana, la sepiolita y las aga- tas, cuyo procedimiento de coloracion por imbibicién era ya conocido y practicado por los arabes. Msta absorcién no queda limitada a los minerales amorfos, para la cual, sobre todo, bibliografia de los mas importantes escritos acerca de las pseudomorfosis. En Espana no tenemos trabajos especiales, pero no puede por esto dejar de consignarse aqui el interés que ofrecen desde este punto de vista observaciones importantes que apare- cen en numerosos trabajos de Geologia y Petrografia, especialmente en los modernos de los Sres Calderon, Quiroga y Macpherson, y algunos de otros cientificos espanoles publicados por la Comisién del Mapa geoldgico. 122 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (10) cuando poseen las estructuras porosa, foliacea, escamosa 6 fibrosa, son especialmente aptos, sino que se patentiza también en los minerales cristalizados, en los que seguramente alcan- zara mayor grado a favor de las presiones considerables 4 que pueden circular las aguas subterraneas (1). En la segunda categoria de fendmenos que intervienen en el proceso pseudomorfico, la accién del agua debe considerarse de dos maneras: como meramente disolvente y como pura- mente quimica. El agua posee propiedades disolventes y cristalogénicas muy dignas de tenerse en cuenta cuando se considera, entre otras cireunstancias, la gran masa de las corrientes subterraneas, su velocidad (2), 4 veces notable, y, por otra parte, la dura- cién, que en cierto modo podemos considerar como indefinida, de su accién sobre los materiales de la corteza terrestre. Numerosas y concluyentes son las experiencias que han puesto fuera de duda la accién disolvente del agua sobre subs- tancias reputadas como insolubles. Ora tenga lugar esta accién en las condiciones ordinarias, ora vaya secundada 6 excitada por presiones enérgicas y en ciertos casos por una tempera- tura elevada, lo cierto es que las investigaciones de Senar- mont, Fresenius, Schulze, Struve, Prost, Binder, Spring y otros, han demostrado la solubilidad de la silice, la magnesia, los sulfuros de plomo, plata, zinc, cadmio, indio y mercurio; los sulfatos de bario, estroncio y plomo: el fosfato aménico magnésico, el fluosiliciuro barico; la fluorita, la manganita, la bornita, la calcosita, la marcasita, y aun silicatos comple- jos, como la apofilita (3). (1) Conviene recordar, antes de pasar adelante, la diferencia esencial que existe, tratandose de los minerales cristalizados, entre la absorcion puramente fisica y la ue se debe a los fendmenos de disociacién observados en ciertas especies hidrata- das como la cristianita, la laumonita, la faujasita y la chavasita, que pierden en el aire seco la cantidad de agua necesaria para que su vapor adquiera la tension de di- sociaciOn correspondiente 4 la temperatura y presion dadas. 2) Thoulet hizo actuar durante 333 dias agua corriente sobre fragmentos de mar- mol, ortosa y caliza litografica, y observé que le pérdida de peso que los minerales experimentaban era mayor que la que tiene lugar en el agua en reposo, y el deposito formado después tanto mds abundante cuanto la accion tenia Jugar en la superficie de un cuerpo de textura mas compacta. /Acad. de Sciences de Paris, Marzo, 1891.) (3) Senarmont aprovecho la presion producida por la calefaccién del agua en tu- bos cerrados 4 250°. Por lo que toca al aspecto cuantitativo de la cuestiédn, consignamos los resultados (11) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 128 Si fijandonos en la accion disolvente del agua sobre la bari- tina, por ejemplo, tratamos de formarnos una idea de la im- portancia geoldgica de esta disolucién, tenemos, ateniéndonos a los resultados obtenidos por Fresenius, que cada metro cu- bico de agua es capaz de arrastrar 25 @. de baritina, 6 sean 14,4 @. de bario. Teniendo en cuenta que la baritina consti- tuye con mucha frecuencia la ganga de los filones metalife- ros, v que investigaciones bastante recientes de W. F. Hille- brand (1) han puesto de manifiesto la presencia del bario en masas considerables de rocas en que se negaba su existencia, demostrada para la gweneralidad de los materiales lapideos de la corteza terrestre, y considerando al mismo tiempo la enor- me masa de agua que filtrando 6 penetrando por las hendidu- ras del suelo acttia de una manera continua sobre esos mate- riales, no dudaremos un momento en atribuir a esta accion disolvente, insignificante en apariencia, un papel importante desde el punto de vista de la movilizacién de los materiales pétreos del globo. siguientes obtenidos por Fresenius (77ratado de cndlisis guimica cuantitativa , traduc- cién espafiola por D. Vicente Peset y Cervera) con la escrupulosidad de un delicado analisis: / Fluosiliciuro de bario...... ..........4.. 0,263 SWLfAtOlEStrONClCO bene. scine eect erect ear. 0,145 CaLrbonatO DATICOL <5 susie aesvane sashes 50% 0,070 . p Fosfato amonico-magnesico.............. 0,069 1.000 partes de agua disuelvenala } | Ae Fe : ; SPA) PIM MDICOn ras.ate cares ight Paclece 0,043 temperatura ordinaria.......... } nis . — IDE CO meter cuelscesisia/mtetetes eieletsinicierete 0,025 Carhbonsto pasico de ZinG. 20 sccjicec was 0,022 — PIMAITL COs ayes ete stehencl eve siete arctetens 0,019 IMIS CSTE, ieee ieteiare t eiaie sien eissere/= eters sie %ersahers 0,017 Muchas de las substancias disueltas se separan por enfriamiento y disminucion de la presion al estado cristalino. Operando en tubos cerrados 4 250°, Senarmont obtuvo la baritina en prismas rombicos previa disolucion de la baritina en masa, y Weeler la apofilita cristalizada. Kroustchoff consiguié obtener cristales de cuarzo operando del mismo modo con la silice obtenida por dialisis. Las formas de estos cristales eran idénticas 4 las que ofrece el cuarzo del tipo filoniano, (1) Journ. of Am. chem. Soc., 1894, p. 81. La opinién generalmente admitida de la ausencia del bario y del estroncio en las rocas eruptivas acidas 6 bAsicas queda des- truida por las determinaciones del autor, que ha encontrado en ejemplares proceden- tes de los distritos de Colorado y de Montania hasta 0,43 por 100 de bario y 0,27 por 100 de estroncio. Por lo que toca 4 las rocas metamoOrficas, la posibilidad de un fuerte con- tenido en bario no es dudosa. El filon del Jaroso, en Sierra Almagrera, ya agotado, se componia en ciertos sitios de celestina amarilla. Ciertas pizarras micaceas de Maro (Malaga) contienen, segun hemos tenido ocasion de observar, este sulfato, que 4 mas aparece formando geodas de pequenos cristales. 124 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (12) La accién disolvente del agua sobre los minerales es el pre- ludio de acciones quimicas, por cuanto las disoluciones pro- ducidas son esencialmente aptas para reaccionar con los ma- teriales en contacto. El estado de gran divisién y la movilidad molecular propia de las substancias disueltas facilitan los pro- cesos quimicos de un modo notable, y en otro concepto hacen posible el arrastre de substancias que al estado sélido perma- necerian eternamente estacionadas en sus yacimientos origi- narios sin prestar el concurso indispensable 4 la evolucién terrestre. En estas ideas, la disolucién de la silice en el agua que Kroustchoff observé mediante el aumento de la presion y la temperatura, tiene, 4 nuestro juicio, un interés capital, si que- remos darnos cuenta de la rotacién de este cuerpo en el reino mineral y de la evolucién de los silicatos. Probablemente el Acido silicico que se deposita por evaporacidn de ciertas aguas termales no alcalinas se halla disuelto en el agua, é importa distinguirle, como agente minerogénico, del que se encuen- tra al estado de silicatos alcalinos. Seguin Berzelius, el agua es el disolvente del acido silicico en aquellas condiciones, por- que si se hierve la silice en polvo fino con una disolucién de carbonato sddico y se trata el liquido filtrado por un acido, no se obtiene depdsito alguno de acido silicico, lo cual prueba, dice, « que éste se hallaba disuelto en el agua» (1). Sin duda la silice de los geysers y de ciertas aguas termales reconoce un origen directamente relacionado con esta propiedad, ma- nifestandose asi tal vez un proceso complementario de la teo- ria que, fundada en las observaciones de Jeffreys, implica un arrastre de anhidrico silicico por los vapores acuosos geyseria- nos; la silice, en efecto, es arrastrada por el vapor de agua a la temperatura de los hornos de porcelana (2). (1) J.J. Berzextius: Traité de Chimie minéral, végétal et animal. Seconde édition francaise, trad. par MM. Esslinger et Heeffer. 1845, t. 1, p. 635. (2) BERZELIUS: ibid., p. 634. Klaproth practico andlisis de la silice de los geysers, encontrando en ella constantemente una cierta porcién de alimina y 6xido férrico, que alcanzan Ja relacién siguiente: Si Oa es 98,0 ¥ LP) O; cere eseces 0,5 Als O-; ere eer eees 0,5 La presencia de los 6xidos ferrico y aluminico que no son arrastrados directamente por el vapor de agna halla una explicacién facil en la accién de éste sobre los vapores de los correspondientes cloruros, proceso que, unido al del arrastre de la silice por el (18) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 125 Pero el papel del agua no queda limitado a la disolucién de los materiales en contacto, sino que muchas veces se realizan al mismo tiempo que ésta fendmenos quimicos importantes, ora de combinacién, ora de descomposicion. Entre los feno- menos de combinacion figuran primeramente aquellos en que el agua entra a formar parte integrante de las substancias nuevamente producidas, hidrataciones que tienen lugar unas veces directamente y otras en virtud de reaccién previa entre los elementos constituyentes de las substancias en contacto. Otras veces la intervencién del agua ofrece un interés particu- lar, porque este liquido se limita a servir como de intermedia- rio en la combinacién directa de los materiales en contacto, como lo atestigua la sintesis de la fosgenita conseguida por Daubrée calentando en tubos cerrados a 180° con agua una mezcla de carbonato y cloruro plimbicos, y la del anfibol, que mas recientemente ha reproducido Kroustchoff calentando en vaso cerrado 4 550°, durante cinco meses, una mezcla formada por los elementos de este mineral con agua (1). Respecto a las reacciones de descomposicién que el agua provoca, son notables las deshidrataciones. El tipo de estos singulares fendmenos es la transformacion del hidrato cuprico en Oxido anhidro por la accién del calor en el seno del agua, y en las mismas condiciones se producen cambios analogos que tienen representacién en la naturaleza. Son también de este wénero la transformacidn del yeso en un producto fibroso de férmula SO, Ca $ H, O (= 2 SO, Ca, H, O), que obtuvo Hoppe-Seyler calentando el yeso con un exceso de agua en tubos cerrados a 140° (2), y la del sulfuro de antimonio hidra- tado en estibina, de aspecto metaloideo, cuando se calienta con agua a 300°, bajo presion. vapor de agua, parece aclarar algtin tanto el origen de los depositos de silice geyse- riana, que no deben considerarse desde luego como una especie de fango 6 limo sus- traido 4 las rocas del subsuelo por la accion mecanica de las aguas termales. Unica- mente la composicion de algunas ftanitas 0 pizarras siliceas arroja una proporcion de silice comparable (la que, segtin Klaproth , se encuentra en los depdsitos indi- cados. (1) Acad. des Sciences de Paris. Marzo, 1891. (2) Con posterioridad 4 las observaciones de Hoppe-Seyler, Pahilitzine ha estudiado un sulfato cAlcico semihidratado cuya formula coincide con la de aquél. (Periodico de la Sociedad fisico-quimica de San Petersburgo. Extracto en Bull. de la S. chim. de Paris, 8¢ série, t. x1-x11, n.° 12, p. 866.) Este proceso de deshidratacién puede ser con- siderado como el primer paso hacia la transformacién del yeso en anhidrita. 126 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (14) También en el mismo orden de la descomposicién merecen recordarse las experiencias de Daubrée, que consiguiéd dosar una cierta cantidad de potasa y de acido silicico en el agua que estuvo ocho dias en contacto con la ortoclasa pulverizada, asi como las reacciones de muchos cloruros metaloidicos y metalicos con el agua, 4 los cuales deben evidentemente su origen algunos minerales, y del mismo modo las descomposi- ciones que el vapor de agua opera sobre los sulfuros 4 tempe- ratura mas 6 menos elevada (1). Algo mas complejas son otras acciones del agua sobre ma-— teriales pétreos que tienen también lugar mediante la infiuen- cia del calor y la presién. Seguin MM. Lévy y Fouqué, calen= tando al rojo una mezcla de granito y agua en vaso de platino iridiado, se obtiene una masa porosa cuajada de pequenos cristales de ortosa y de mica, que se asemeja de un modo no- table 4 la traquita micacea de los volcanes (2). La accién del agua sobre la arcilla de Klingenberg dando en tubos cerrados laminillas de mica 6 clorita, y la que permitiéd 4 Daubrée ob- tener un producto caolinico hojoso, cristales de cuarzo, un sili- cato de sodio soluble, esferolitas de calcedonia y cristales de diopsida, calentando el agua pura en tubos cerrados de vidrio, son también fendmenos complejos, importantes por cuanto re- presentan juntamente combinaciones y descomposiciones que tienen efecto por la simple reaccion entre el agua y los silica- tos. Finalmente, la accién directa del agua provoca también procesos quimicos muchas veces muy complejos, tanto de ca- racter sintético, como analiticos 6 de descomposicién, repre- (1) Hé aqui, segan Tommasi, les productos de la accidn del vapor de agua sobre algunos sulfuros 4 alta temperatura: Sulfuro de plata......... Plata metalica. -- de mercurio.... Mercurio metalico. de cobre........ Cobre metalico. _ VP AT NOS Basan Oxido de zine. — deniquel....... Oxido Ni O. — decobalto....... Oxido Co O. — dehierro........ Oxido Fe; O,. — de arsénico. .... Oxisulfuro Sy Asse O. ~ de antimonio... Oxisulfuro S, Sb, O. - de plomo........ Sulfuro S Pb + sulfato SO, Pb (Pattinson). D. Tommasi: 7'raité théorique et pratique a’ Blectrochimie. 1890, p. 572. (2) Nota comunicada i la Academia de Ciencias de Paris. 1891. —_ | = (15) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL, 12% sentados, segtin Credner (1), por ciertas transformaciones de la albita, oligoclasa, micas, hornblenda, augita, magnetita, oligisto, hematites compacta y pirolusita. Cuando a la accién propia del agua se une la de los gases y sales que lleva disueltos (2), los fendmenos quimicos que pro- voca sobre los minerales son, aparte de su caracter particular, mucho mas enérgicos y rapidos. Ademas, la presencia de cier- tas substancias en disoluciOn modifica bastante en muchos casos las propiedades disolventes del agua. Iintre las disoluciones acuosas de los gases ninguna desem- pena un papel tan importante y universal como las del acido carbonico. Estas constituyen uno de los principales factores del equilibrio entre las acciones endoteluricas y los procesos opuestos subaéreos-acuosos. Su intervencidn ofrece dos puntos de vista, ya se las considere como simple disolvente (en apa- riencia al menos) de ciertos minerales, ya como agente capaz de efectuar cambios quimicos. Las experiencias de Struve demuestran que se pueden obte- ner aguas de idéntica composicién que las de determinadas fuentes minerales por la accion de las aguas carbdnicas sobre distintas rocas pulverizadas. La silice gelatinosa, la calcita, la magnesita, la dolomita, la siderita (3), se disuelven en las aguas carbénicas, regenerandose las substancias disyeltas cuando el gas se desprende. (1) Traité de Géologie et de Paléontologie, trad. par R. Moniez. 1879, p. 183. (2) No siempre las aguas subterrdneas contienen proporciones algo notables de substancias solidas y gaseosas disueltas. Por lo que toca 4a estas Ultimas, baste recor- dar como ejemplo que, aun algun tiempo después de abierto el pozo artesiano de Grenelle, estuvo produciendo un agua de muy malas condiciones de potabilidad, é indigesta tanto para el hombre como para los animales. Debianse estas propiedades, segin demostro el anilisis, i la ausencia completa del oxigeno y 4la pequenisima porcion de gases disueltos. (3) Las proporciones de estas substancias que se disuelven en 1.000 partes de agua son las siguientes: Silice gelatinoga....35 366000 ces sea6 0,1 Gal Cita ccs oss e's stacste ler cig once naisyaererals [1,1 4 0,33 Dolomites, vis2.: cticens aareas ee oe eyes 31 MaQnesitay . 425.55: 0e. sateen c eins 12 Siderita.. is sineiiscsdie cclsaitide sees ee 72 La cifra consignada para la calcita corresponde, segiun Credner (Op. cit., p. 182), al promedio de todas las variedades 6 estados de agregacion del carbonato cdlcico. Cossa (Tschermak, Op. cit.), da para é] un coeficiente mas elevado. 128 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (16) Operando bajo presidn, Sénarmont consiguid obtener crista- les de cuarzo por disolucién de la silice gelatinosa en el agua carbdnica 4 350° en vaso cerrado, y sustituyendo la silice con el Acido titanico se han obtenido cristales de rutilo. Seguin Binder (1), 4 la presién de 90 atmdferas se disuelven la piro- morfita y la epidota. Las acciones quimicas que las aguas carbénicas efectian sobre los minerales son numerosas y transcendentales. Ya Ebelmen (2) traz6 el proceso general de las alteraciones que los silicatos sufren mediante la influencia del Acido carbénico, deduciendo de sus observaciones importantes principios que establecen en cierto modo un equilibrio especial entre las con- diciones de vida en las dos categorias de seres organizados. Decia este sabio, en efecto, que las acciones quimicas que a las temperaturas elevadas reinantes en las regiones profun- das de la corteza del globo ocasionan la separacién del anhi- drido carbonico de los carbonatos, serian una fuente de este gas, fatal para la vida de los animales, si una accién suprate- rrestre opuesta no lo fijase de algun modo regulando la canti- dad de anhidrido carbonico atmosférico. Ebelmen observé que el contenido en silice, cal, magnesia y alcalis de las arcillas es siempre inferior al de las rocas igneas originarias, y que, por consiguiente, aquéllas no pueden considerarse como el re- sts, de la simple ‘trituracién 6 divisién mecanica de estas rocas, pues en tal caso la composicién debia ser la misma en ambas. Seguin él las arcillas no representan otra cosa sino el remanente de la accidn quimica de las aguas carbonicas sobre las rocas originarias, acciédn que pone de manifiesto un pro- ceso general de alteracién de todos los silicatos de alumina y alcalis 6 tierras alcalinas. La transformacién tan frecuente de la ortosa, por ejemplo, dando productos caolinicos, es una prueba en favor de las conclusiones de Ebelmen, puesto que es sabido y experimentado que dicho mineral pierde los alca- lis y parte de su silice por la accién de las aguas carbdnicas, conservando la alumina. En los silicatos no aluminosos cuyos mineralizables son la cal, la magnesia y los éxidos de hierro y (1) Min. und Petrogr. Mith., p. 332. 2) Recherches sur les produits de la descomposition des especes minérales de la famille des silicates. (Ann. des Mines, 4¢ série, t. vir. 1845, p. 1.) (17) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 129 manganeso, las aguas carbonicas eliminan por completo en ultimo término aquellas tierras, quedando un residuo consti- tuido por silice y Oxidos superiores de hierro y manganeso. Por ultimo, en los silicatos de 6xido ferroso y alcalis las aguas carbonicas separan estos tltimos, y el remanente esta consti- tuido por el sesquidxido de hierro hidratado y la silice (1). Las experiencias de Miiller se hallan también de acuerdo en demostrar la accion quimica de las aguas carbonicas bajo pre- sidn. Operando con los silicatos pulverizados a la presidn de 31/, atmdésferas, obtuvo los resultados siguientes al cabo de siete semanas de contacto: La ortoclasa se disuelve en la proporcién de 0,328 por 100 de disolvente, y en la disolucién prepondera la potasa y luego la silice. Kl olivino lo hace en la proporcién de 2,111 por 100 de agua carbonica, y en la disolucién domina, principalmente, el dxido ferroso, y después el silicato Si O, Mg O (2). La misma cantidad de agua carbdénica disuelve 1,211 de serpentina, dominando en la disolucién los éxidos magnésico y ferroso. En vista de estos datos se puede inferir que la relacién en que se encuentran los elementos disueltos es sensiblemente distinta de la que ofrecen los elementos del mineral atacado, y que por consecuencia, la accion disolvente del agua carbo- nica sobre estos silicatos va acompanada de modificaciones quimicas. Con posterioridad a4 las experiencias de Miiller, Binder (3) ha observado la descomposicion de la andalucita y de la anortita por el agua carbonica a la presién de 90 atmosferas. Ademas de estos fendmenos de descomposicion, la influencia de las aguas carbénicas provoca en los minerales modifica- ciones de caracter sintético, tales como muchas de las reali- zadas en la llamada montera, de los filones, constituyentes de (1) El Sr. Calderon y nosotros hemos tenido ocasién de observar un caso de esta accion general de las aguas carboénicas en el curso de las alteraciones que sufren los eranos de glauconita aprisionados en algunas calizas y areniscas. (Calderon y Chaves, Contribuciones al estudio de lu glauconita. AN. DE LA SOC. ESP. DE HIST. NAT., 2.2 serie, tomo xx11, 1893.) (2) TscHERMAK. Op. cit.; P. G., paginas 16 y 17. (3) Loc. cit. ANALES DE HIST. NAT. —XXYIII. 9 180 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (18) formaciones parasitas de malaquita, cerusita y otros carbona- tos. Las transformaciones de esta indole son, sobre todo, im- portantes en los silicatos. Sirva de ejemplo la obtencidén de la heulandita por Doelter, mediante la accién del agua carbéni- va y la silice recientemente precipitada sobre la anortita (1). Los bicarbonatos, como combinaciones facilmente descom- ponibles en las condiciones ordinarias poniendo en libertad parte de su anhidrido carbénico, y regenerando los carbonatos, desempenan un papel importante en la evolucién del globo, pero en el respecto que ahora nos ocupa, su interés estriba mas que en nada en la accién quimica del anhidrido carbéni- co que al estado naciente son capaces de suministrar; asi pues, en el orden de enumeracién de los agentes de las trans- formaciones quimicas de los minerales, les corresponde un lu- gar idéntico al que ocupa el anhidrido carbonico. Comportanse también los bicarbonatos en muchos casos como disolventes, y las numerosas experiencias realizadas al objeto, han dado resultados de bastante interés. Operando 4 250° con los bicarbonatos alcalinos y el sulfato barico, se han producido cristales de baritina, y con el sulfuro de antimonio se ha obtenido en las mismas condiciones un Ifquido verdoso que por enfriamiento deposita una costra metalica en la cual se implantan largas agujas de estibina (2). La disolucién del rejalgar y el oropimente, conseguida por Sénarmont calentando estos minerales con disoluciones de los bicarbonatos alcalinos, es un hecho muy curioso, pues mien- tras con el primero se deposita por enfriamiento una mezcla de cristales de rejalgar con algo de oropimente, el segundo da ‘i veces cristales de rejalgar. El éxito de esta transformacién reversible depende de la concentracién y de la temperatura. A nuestro juicio, esta interesantisima experiencia merece ser objeto de nuevas investigaciones que, encaminadas principal- mente al estudio del limite de concentracion de las disolucio- nes, fijen las condiciones de reversibilidad de ambos sulfuros de arsénico. (1) Las formulas de la anortita y la healandita son, respectivamente: Alg (Si O4)g Cas Al, (Sis Og)g Caz, 16 H,O. (2) Con las disoluciones muy concentradas se obtienen pocos cristales, pero en cambio se observa la formacida de un depdsito pulverulento que parece ser de piro- estibita. (19) .Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 131 Los fendmenos que producidos mediante la influencia de los bicarbonatos revelan, desde luego, acciones quimicas, son también muy importantes y numerosos. De este orden son la produccion de carbonato calcico pulverulento por la accién de las disoluciones transparentes de carbonato de magnesio en agua carbdnica a 100° sobre el cloruro calcico, y la de una mezcla de carbonatos de calcio y de magnesio mediante los mismos agentes 4 la temperatura de 150°. Hechos son éstos que demuestran la influencia que la temperatura de las diso- luciones carbonatadas calcico-magnésicas han ejercido en la produccién de los depésitos calizos y dolomiticos. Al esclare- cimiento de la génesis de los carbonatos de calcio contribuyen también las experiencias de Becquerel, que logré producir cristales de aragonito, mediante un contacto sostenido por al- gunos anos de las disoluciones de bicarbonato sddico sobre la- minas de yeso, fendmeno que se produce en pocos dias si se opera a la temperatura de 100°. Por lo que & la formacién de ciertos depdsitos de carbonato calcico de origen evidente- mente pseudomorfico se refiere, debemos citar también la ac- cin de las disoluciones calientes de carbonato sddico sobre la fluorita. Finalmente, los cristales obtenidos por Fritzche ca- lentando una mezcla de bicarbonato sédico y cloruro calcico disueltos, dieron 4 Kokscharoff medidas idénticas a los de la gaylussita natural. También en condiciones andlogas, mediante la intervencidn de los bicarbonatos, se han obtenido otros carbonatos por pro- cedimientos de laboratorio que reflejan los procesos naturales: Rose obtuvo la smitsonita por la accién del bicarbonato pota- sico sobre el cloruro zincico en presencia del agua que obra como deshidratante del carbonato zincico hidratado que se for- ma primeramente, y Sénarmont consiguid cristales de dicho mineral calentando en tubos cerrados la misma sal zincica con el bicarbonato calcico. En virtud de una reaccion analoga, y mediante el contacto prolongado del bicarbonato sddico sobre la galena, se obtienen en frio cristales de cerusita. La formacién de malaquita por la accién del bicarbonato sddico sobre el cloruro cuprico, la de la azurita que consiguid Becquerel sometiendo 4 una lenta difusidn disoluciones del mismo bicarbonato y de nitrato ciprico en presencia de la cre- ta, y la produccién también de malaquita cuando actian las 132 ANALES DE HISTORIA NATURAL. ; (20) disoluciones de aquella sal sobre la brochantita 6 sobre la ata- camita, son hechos importantes que ponen de manifiesto el origen de muchas de las evoluciones acaecidas en los yaci- mientos de los minerales cupriferos, y dan cuenta ademas de la concomitancia de las tres combinaciones ciipricas citadas en la patina de los antiguos objetos de cobre y bronce encontra- das en las excavaciones (1). Entre otras reacciones debidas a los bicarbonatos que en- cuentran representacién en la naturaleza, debemos citar espe- cialmente la produccién del yeso, que obtuvo Sterry Hunt en cristales, por la mezcla del bicarbonato calcico con el sulfato magnésico disuelto; proceso éste, sin duda, muy general, y al que puede, quiza, referirse la formacién de los pequenos cris- tales de yeso trapeciano de las margas de Morén y las maclas en punta de lanza de las lagunas de Fuente-Piedra en nuestra region andaluza, para citar algun ejemplo (2). La intervencién de los carbonatos disueltos en los procesos minerales tiene gran analogia con la de los bicarbonatos y el anhidrido carboénico. A su influencia se deben muchas dobles descomposiciones originadas de carbonatos cristalizados idénti- cos 4 los naturales. Drevermann, por ejemplo, obtuvo cerusita por la accién del carbonato sdédico disuelto sobre el nitrato (1) A los resultados de otros andlisis que pudieran aducirse unimos los de Berthe- lot relativos 4 la alteracion de antiguos objetos de cobre y bronce. La fuerte patina que alcanzaba al centro de la masa de una figurilla votiva de origen caldeo contenia una mezcla de atacamita y carbonato de cobre (malaquita ?) y su anialisis arrojaba 1,1 por 100 de cloro que corresponden 4 6,6 del oxicloruro. La patina de un vaso de cobre egipcio did 6,2 por 100 de cloro al estado de atacamita, y un anillo de bronce plumbifero de fecha probablemente posterior did 9,4 por 100 de las substancias si- guientes: cloro al estado de atacamita, oxigeno, agua, vestigios de azufre, sales cél- cicas y alealinas. (Berthelot, «Sur quelques objets en cuivre de date trés ancienne prove- nant de la Chaldée» y «Sur quelques nouveaux objets de cuivre provenant de Vancienne Egypte.» Bull. de la Soc. chim. de Paris, 3.e série, t. xi-x1r, n.° 16-17, paginas 859 y siguientes). 2) Relativamente 4 la discutida historia de la génesis y evoluciones del yeso de los yacimientos espanoles y 4 las teorias emitidas en tal respecto, recomendamos los importantes trabajos del Sr. Calderén: Za sal comun y su papel en el organismo del glo- bo. (AN. DE LA Soc. ESP. DE Hist. NAT., t. xviii, 1888.)—Zos volcanes fangosos de Mo- ron. (1b., t. xx, 1891.)—Origen de la sal comin y de los sulfatos de los terrenes terciarios lacustres de la Peninsula. (1b ,t. xxiv, 1895), especialmente este Gltimo que resume la bibliografia espanola sore la cuestién. También citaremos 4 este mismo propésito la excelente memoria del malogrado gedlogo Cala, publicada en los mismos ANALES, Geologta del término de Mordn y descripcidn de su yacimiento diatomifero. 1897. (21) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 133 plimbico, y Becquerel consiguié obtener el mismo mineral mediante el contacto de la disolucién del carbonato sddico con la galena. Muchos de los fendmenos quimicos que los bicarbo- natos provocan en las combinaciones cupriferas, se verifican también con los carbonatos. Estos tienden, en general, a for- mar nuevos carbonatos por doble descomposicion, pero en ciertos casos el anhidrido carbonico se separa precipitandose los Oxidos correspondientes. Asi sucede en el caso de las sales férricas y aluminicas, de las cuales separan los respectivos sesquidxidos al mismo tiempo que se desprende el gas. Metamorfosis mas complejas y de gran importancia tam- bién son las que producen los carbonatos alcalinos sobre los silicatos. Estas metamorfosis dan muchas veces origen a combinaciones que tienen representacion en la naturaleza, y a ellas se deben, sin duda, numerosas pseudomorfosis. De or- dinario, y sobre todo cuando se trata de bases alcalino-térreas 6 de la magnesia, el Acido carbénico queda unido a éstas for- mando los carbonatos correspondientes, pero con los silicatos ferriferos y manganesiferos, y particularmente cuando inter- viene el oxigeno del aire, el anhidrido carbonico queda libre, separandose Oxidos superiores de hierro y de manganeso. Kn fin, en los silicatos aluminosos, la alumina no es siempre eli- minada, sino que en ocasiones queda formando parte de nue- vas combinaciones mas 6 menos complejas. Como ejemplos de estas metamorfosis debidas a la accion de los carbonatos alca- linos, tienen mucho interés por aportar hechos a la historia de la constitucién quimica de ciertos silicatos, la transforma- cidn de la monticellita en silicato magnésico y carbonato cal- cico, la de la gehlenita en cancrinita, conseguida por Lem- berg mediante el mismo agente, 4 la temperatura de 200°, y la del mismo mineral en un producto que tiene la composi- cién de la mica potasica observada también por Lemberg en las mismas condiciones de temperatura por la intervencion del carbonato sdédico. Muchas de las transformaciones quimicas de los minerales pudieran atribuirse a la accién del acido clorhidrico libre; pero merced a4 su gran energia de combinacion para las bases escasea tanto este agente en la naturaleza, que casi se en- cuentra exclusivamente entre los productos de las emanacio- nes volcanicas. No obstante se han atribuido a su influencia 134 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (22) especial ciertas alteraciones filonianas, lo que parece encontrar comprobacion en las experiencias del laboratorio. Recordare- mos, para citar alguna, el paso de la plata nativa a querargi- rita, conseguido calentando de 100 4 150° una lamina de plata con el acido clorhidrico. Por otra parte, se conocen una porcidn de reacciones que tienen representacién en la naturaleza y muestran que el acido clorhidrico que al estado naciente se desprende en muchas acciones quimicas, es agente minerogé- nico importante. Numerosas experiencias de laboratorio acu- san claramente el origen de este hidracido, tanto volcanico como filoniano, origen que en todos casos esta en la descom- posicién de los cloruros que, ya por la via acuosa, ya por la accién del calor, ceden sus elementos basigenos 4 mineraliza- dores capaces de contraer combinaciones mas estables en las condiciones dadas (1). Recordaremos entre estas acciones pro- ductoras de acido clorhidrico la del acido sulftirico sobre los cloruros, reversible en condiciones determinadas; la del hidro- geno sulfurado sobre los cloruros volatiles 4 temperatura ele- vada, inversa a la que en frio se verifica entre el Acido clorhi- drico y los sulfuros; la descomposicién demostrada por Gay- Lussac de los cloruros alcalinos por los silicatos en presencia del vapor de agua; la accién de éste sobre algunos cloruros metaloidicos y metalicos, como el bérico, el de niquel y el fé- rrico; la descomposicion de las disoluciones concentradas de cloruro magnésico por el calor, etc. En todas estas reacciones, la influencia de la masa, de la disolucién y de la temperatura se dejan sentir de un modo notable, demostrando hasta qué punto crece el interés de los equilibrios quimicos cuando de conocer las transformaciones mutuas de los minerales se trata. También el acido clorhidrico muestra propiedades disolven- tes y cristalogénicas para gran numero de minerales. Bajo presion y con auxilio del calor disuelve la silice gelatinosa, el anhidrido titanico amorfo, los sulfatos barico, estroncico, cal- cico y plumbico, el fluoruro calcico y el cinabrio, depositan- dose por enfriamiento cristales idénticos por su forma y su composicidn a las especies naturales correspondientes. Kn lo que se refiere a las modificaciones quimicas que el (1) CALDERON, La sal comin y su papel en el organismo del globo. —AN. DE LA SOC. ESP. DE HIST. NAT , tomo xviI, 1888, (23) Chaves.—ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 135 acido clorhidrico provoca en los silicatos, debemos tener pre- sente, asi como lo haciamos al tratar del anhidrido carbdénico, que la influencia de este agente queda limitada a la tempera- tura ordinaria 6 poco elevada, por cuanto a temperaturas al- tas el acido silicico se comporta desde luego como un minera- lizador mas enérgico, desalojandolo de sus combinaciones, he- cho que explica de una manera patente el origen del acido clorhidrico volcanico, y consolida en este caso particular la doctrina del equilibrio entre las acciones igneas y las acuosas, mostrando la ley de compensacion en los cambios substancia- les que entre los minerales se verifican. Bien conocida es de los gedlogos la accidn del acido clorhidrico sobre los silicatos naturales, por lo que toca a la posibilidad de su descomposi- cidn, y el interés de esta reaccién en lo que se refiere al diag- nostico de dichos minerales. En el caso de los silicatos mas 6 menos atacables por el acido clorhidrico, la silice separada puede afectar modificaciones distintas y diversos grados de hidratacién, lo cual conviene tener presente al indagar las acciones quimicas de que son capaces los productos de su dis- gregacion. Pero la importancia minerogénica de las combinaciones de cloro, estriba principalmente en la accién de los cloruros, ac- cion de una gran generalidad si se tiene en cuenta la abundan- cia de estos compuestos en las aguas y entre las capas del suelo, y en otro concepto, su estabilidad. Las experiencias de M. Gorgeu, han demostrado que los cloruros alcalinos se com- portan como disolventes en ciertas condiciones. La baritina, la celestina y la anhidrita pueden obtenerse en cristales por di- solucién de los correspondientes sulfatos en los cloruros fun- didos. En estas condiciones la dolomita sélo da magnesia amorfa y cristales de calcita, al paso que una mezcla de car- bonatos de bario y calcio origina alstonita en cristales. Adoptando igualmente la via ignea, Forchammer obtuvo el apatito cristalizado mediante la fusion de una mezcla de fos- fato tricalcico y cloruro sédico. También Devray consiguid re- producir este mismo mineral calentando a 250° el fosfato dical- cico con una disolucién de cloruro calcico. Ambas sintesis son interesantisimas, porque ponen de relieve el hecho de la introduccion del cloro en los fosfatos mediante las disolucio- nes de los cloruros, mostrando la posibilidad de que estas diso- 136 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (24) luciones jueguen un papel directo en las pseudomorfosis que dan por resultado combinaciones cloradas complejas, como algunos silicatos. Los diferentes cloruros disueltos acttian sobre la calcita de diverso modo, A la temperatura de 100° las disoluciones de cloruro magnésico provocan la sustitucién del magnesio al calcio, llegando a alcanzar estos dos metales las proporciones en que se encuentran en la dolomita. El cloruro férrico la des- compone, desprendiéndose anhidrido carbénico y depositan- dose limonita. A su vez el cloruro de aluminio, cuyo origen en la naturaleza radica en la accidn de las aguas cloruradas sobre los silicatos de alumina, produce un depdsito de alimina hi- dratada. Estas dos ultimas reacciones dan cuenta de la proce- dencia y formacidén de la bauxita (1), cuando actuan sobre la calcita los dos cloruros a la vez. Algunas de las sintesis de la atacamita demuestran también la accién especial de las disoluciones cloruradas. Tales son la debida 4 Friedel mediante la accién del cloruro sddico sobre el nitrato tribésico de cobre, y también la que logro Devray calentando 4 100° la mezcla del mismo cloruro y de sulfato de cobre amoniacal disueltos en agua. M. Ch. Sainte-Claire Deville observ que las disoluciones de los cloruros calcico y magnésico reaccionaban sobre una are- nisca formada en su totalidad por granos de cuarzo con vesti- cvios solamente de carbonato calcico, previamente calentada al rojo, dando una masa facilmente pulverizable que calentada al blanco tomaba un color blanco lechoso, se mostraba inataca- ble por los acidos y tenia la densidad «del piroxeno 6 del an- fibol» (2). Esta experiencia, que atestigua la introduccién de las bases en la silice por medio de las combinaciones clorura- das, aleanza mayor generalidad extendiéndose a los silicatos, en virtud de la observacién del mismo autor de que las diso- luciones de los cloruros alcalinos atacan las arcillas a tempe- raturas no muy elevadas produciendo feldespatos. El] hecho es (1) MEuNIER: Méth. de Synth. en Min. (2) Metamorjfismo en las rocas sedimentarias. Accidn de las sales solubles del agua del mar en las calizas , las arcillas, las areniscas y otras rocas siliceas. Noticia de este tra- bajo en Ja «Revista de los progresos de las Ciencias exactas, fisicas y naturales.» Ma- drid, tomo vill, pag. 4383. (29) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 137 importantisimo, y entre otras aplicaciones 4 que su considera- cidn se presta, no podemos menos de recordar, por referirse a fenomenos de pseudomorfismo quimico de materiales de las rocas andaluzas, la posibilidad de la intervencién de un pro- ceso analogo debido a los mismos agentes en la formacién de los cristales de plagioclasa de las ofitas, los cuales deben su origen, en opinidn del Sr. Calderdén, a los efectos del meta- morfismo sobre un barro htimedo y caliente (1). Y, por ultimo, ciertas metamorfosis muy interesantes, de caracter sintético, que resultan de la accién de los cloruros, tienen representacion mas 6 menos directa en los procesos pseudomorficos progresivos naturales. De ellas son notables la transformacidn de la leucita en una mezcla de ortoclasa y de nefelina mediante las disoluciones de cloruro sddico, y la que, segun Doelter, se observa calentando @ 220° la okenita con una mezcla de cloruro de aluminio, carbonato sddico y agua carbonica. Los productos de esta ultima transformacion son la apofilita, la analcita y la chavasita. La oxidacidn rapida del hidrégeno sulfurado en presencia del agua, y sobre todo de las materias porosas, es una fuente muy constante de acido sulftrico en los yacimientos sujetos a las acciones hidrotermales. Pero a pesar de esto, y en virtud de la misma causa que tuvimos en consideracion al ocuparnos del acido clorhidrico libre, la intervencion del acido sulftirico radica de un modo general en la accion de los sulfatos solu- bles que con tanta frecuencia se hallan en las aguas minera- les, y alos que, sin duda alguna, se debe el origen de las gran- des masas de yeso de los terrenos sedimentarios (2). Ks crecido el numero de experiencias en que se demuestra la intervencion de los sulfatos en las transformaciones de los minerales, y a ellas se debe la reproduccion artificial del yeso, (1) La région epiyenique de Vv Andalousie et Vorigine de ses ophites. «Bull. de la Soc. géol. de France», 8¢ série, t. xvi1r.— Za region epigénica de Andalucia y el origen de sus ofitas. «Boletin de la Comisi6n del Mapa geologico», 1801. (2) Aqui nos referimos 4 las grandes masas de yeso de sedimento quimico, y nunca al yeso de origen metamorfico 6 secundario, cuyo proceso de formacién puede ser muy variable y provocado 4 veces por la descomposicién de las materias orgdnicas 6 su accién reductora sobre rocas sulfatadas preexistentes , como acontece, segtin el se- nor Calderon, en los yesos epigénicos de Andalucia, que estima dicho distinguido geologo hallan su origen en la sulfatizacion directa de las calizas y las margas. (Calderon: Los volcanes fangosos de Moron.) 138 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (26) la anhidrita, la baritina, la celestina, la anglesita, la brochan- tita y otros sulfatos; pero, en cambio, se poseen pocos datos res- pecto 4 las alteraciones que estas sales producen en los sili- catos. Faltan realmente observaciones encaminadas a inquirir hasta qué punto los sulfatos puedan provocar la introduccién del azufre en la molécula de los silicatos para dar combinacio- nes como la haiiynita, la nosita, la lazulita, la helvita, la da- nalita y otras cuya génesis es en absoluto desconocida. Es muy cierto que por la accién del sulfato sddico sobre el caolin en presencia del azufre y del carbén, y operando por via seca, se ha logrado la sintesis de la lazulita al mismo tiempo que la obtencidn de otros ultramares no representados en la natura- leza; pero precisamente esta sintesis no ha arrojado luz alguna sobre la constitucién y el origen de aquel mineral, respecto a los cuales se han emitido diversas hipotesis (1). Un grupo de alteraciones que merece estudio especial, por dar la clave del proceso pseudomorfico de infinidad de mine- rales metalicos, son las operadas por el hidrégeno sulfurado. Ya proceda este gas de acciones intraterrestres, ya de otras mas localizadas cuya base sea la reduccién de los sulfatos, su papel mineralizador exclusivamente de los metales pesados lo coloca en el numero de los agentes quimicos mas eficaces. La mas sencilla de las experiencias aplicables a los compuestos naturales es la verificada por H. Sainte-Claire Deville haciendo actuar el hidrégeno sulfurado 4 temperatura elevada sobre laminas de plata. Los cristales asi obtenidos presentaban las formas observadas en la argirosa. La experiencia de M. Bau- bigny también es muy hacedera é interesante por lo que se refiere 4 la produccién de la blenda cristalizada por la accién directa del hidrégeno sulfurado sobre el sulfato zincico. El procedimiento de Durocher, que reviste bastante g@enera- lidad, se basa asimismo en la accién directa del hidrdgeno sulfurado, y mediante él consiguid este sabio obtener la pirro- (1) La manera como el azufre se halla enlazado en la molécula de la lazulita se presta 4 interpretaciones muy diversas. Para unos dicho elemento sustituye al oxi- geno unido al silicio; segvin otros, se halla al estado de hiposulfito, al menos en parte. ff. W. Clarke (The constitution of the silicates. «Bull. U. S. Geol. Survey», n.° 125, paginas 22 y 103) acoge la formula adoptada por Brogger, esto es Al, (Si O04); Nay (Al Ss Na), formula que en realidad dista ain mucho de quedar definitivamente establecida. (27) Chaves.—- ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 139 tita, la galena, la estibina y la bismutina, partiendo de los cloruros volatiles correspondientes. Los cloruros argéntico y plimbico dieron respectivamente argirosa y galena. Idéntico en el fondo al procedimiento de Durocher, aunque de mas generalidad atin, por lo que se refiere 4 determinados sulfuros, es el de M. Ad. Carnot, que permite obtener cristales de galena y argirosa 4 partir de un 6xido, un sulfuro amorfo 6 una sal de plomo 6 plata. La experiencia de Rammelsberg’, que logré una verdadera pseudomorfosis del hierro oligisto en pirita por la accién del hidrogeno sulfurado 4 temperaturas comprendidas entre 100° y el rojo sombra, ofrece mucho interés en el respecto minero- e@énico, y es también notable desde el punto de vista quimico. Anterior 4 esta experiencia fué la de Berzelius, que consistid en dirigir una corriente de aquel gas sobre la siderita en cris- tales, calentada, obteniendo asimismo una pseudomorfosis en pirita. Por referirse 4 la sintesis de minerales mas complejos que los sulfuros y deberse también al hidrégeno sulfurado, tienen mucha importancia las experiencias que realizé Durocher ha- ciendo pasar una mezcla de hidrégeno sulfurado y vapores de cloruro de antimonio 6 de arsénico sobre el cloruro argéntico al rojo, y cuyos resultados fueron la sintesis de la argiritrosa y la proustita respectivamente. Los sulfuros ocasionan muchas y frecuentes alteraciones quimicas. Su afinidad por el oxigeno libre a la temperatura ordinaria tratandose de los de los metales alcalinos, y en ge- neral de los solubles, y de los insolubles cuando se hallan re- cién precipitados, y a temperaturas elevadas todos ellos; la volatilidad de algunos por el calor y su facil descomposicidn por los acidos, los colocan a la altura de los mas poderosos agentes que provocan alteraciones pseudomorficas. Operando con los sulfuros alcalinos disueltos y las corres- pondientes sales metalicas, reprodujo Sénarmont a tempera- turas elevadas la pirita amarilla, probablemente la pirita blan- ca, el sulfuro de manganeso, la hauerita, la millerita y la blenda, sintesis todas ellas de inmediata aplicacién a la solu- cién de los problemas que el estudio de las pseudomorfosis Sugiere. Mas no son sdlo los sulfuros solubles los capaces de provo- 140 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (28) car cambios quimicos en las disoluciones metalicas; porque, como lo ha demostrado M. St. Meunier, muchos sulfuros sdli- dos precipitan el oro y la plata de sus disoluciones salinas acuosas, mostrando asi de una manera evidente una de las principales causas (1) de la reduccién de los minerales de plata en los filones en que se encuentra nativa (2). Algunas reacciones complejas en que intervienen los sulfu- ros han prestado también su contingente a la sintesis mine-: ralogica. Sirva de ejemplo la observada por Sénarmont al ca- lentar 4 250° una mezcla de disoluciones de cloruro férrico, cloruro cliprico, polisulfuro sédico y carbonato de la misma base. El resultado fué la obtencién de la calcopirita. Por ultimo, al lado de las alteraciones que hallan su causa en la accion de los sulfuros, debe ser recordada la sintesis de la plata roja arsenical mediante la reaccién a 250-350° entre las sales de plata y un sulfoarsenito disuelto en un exceso de bicarbonato sddico. La sustitucidn del sulfoarsenito por un sulfoantimonito 6 un sulfoantimoniato origina cristales de proustita. Es indudable que las disoluciones de gas sulfuroso proce- dentes ya de la oxidacién del hidrédgeno sulfurado en ciertas condiciones, ya de la reduccidn directa del Acido sulftrico, deben intervenir con mucha frecuencia en los procesos mine- rales. Experiencias de Geitner han demostrado efectivamente que operando 4 200° la magnetita se transforma en pirita cris- talizada, y la argirosa se reduce a plata metalica. Han sido poco estudiadas, sin embargo, las alteraciones debidas al gas sulfuroso y sus disoluciones. Los fosfatos, que se hallan tan difundidos en los terrenos antiguos y aparecen en los mas modernos constituyendo ma- sas de consideracion, intervienen también con frecuencia en (1) Essabido que la reduccion de los minerales de plata en los filones se ha tratado de explicar también por la accién del hidrogeno funddindose en una experiencia de Margottet , que consiste en hacer pasar dicho gas sobre la argirosa calentada al rojo. (2) Experiencias practicadas por nosotros con objeto de estudiar la accién de los sulfuros naturales sobre algunas disoluciones metdlicas nos han dado un resultado negativo. La pirita de hierro de Valdelamusa (provincia de Huelva), notable por no contener ni aun trazas de cobre, sumergida durante cinco meses en una disolucién de sulfato caprico, no cedio al liquido hierro ni tom6 de él cobre en proporcién sen- sible, como esta previsto por la teoria. (29) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 141 la evolucién de los minerales, y son agente capaz de realizar pseudomorfosis de proceso quimico. Para demostrar su efica- cia como tales agentes baste recordar, tratandose de los fosfa- tos solubles, las sintesis de la hureaulita y la hopeita, y por lo que toca a los fosfatos insolubles, las de la libetenita, la cal- colita, el apatito y la piromorfita. El numero relativamente restringido de pseudomorfosis referentes 4 minerales fosfata- dos nos excusa de detenernos a describir dichas experiencias sintéticas, basadas generalmente en la doble descomposicion que tiene lugar entre un fosfato soluble y una sal ya soluble, ya insoluble, 6 entre un fosfato insoluble y diversas sales en estado de disolucién (1). La importancia de los nitratos como agente pseudomorfico radica en la descomposicién de dichas sales para ceder sus bases 4 minerales ya constituidos. Acthan de este modo por doble descomposicion, bien manifiesta en la sintesis de la ar- gwirosa y en la de la galena, conseguidas por Becquerel hacien- do reaccionar los nitratos argéntico y plimbico con un sulfuro alcalino 4 100-150° bajo presion. La sintesis de la gerardtita efectuada por Wells y Penfieid constituye una rara excepcion al modo general de actuar de los nitratos. La obscuridad que actualmente reina acerca de la historia y evolucién de los minerales fluoriferos, y especialmente de aquellos silicatos en que el fluor se halla con bastante frecuen- cia, no permite basar sino en suposiciones mas 6 menos funda- das el proceso quimico realizado en las pseudomorfosis referen- tes a dichos minerales. Los fluoruros de boro, calcio y los alca- linos, parecen ser los agentes naturales capaces de introducir el fluor, al paso que los productos de la accién de las disolucio- nes salinas sobre las combinaciones fluoriferas; pero no obs- tante, y a pesar de haberse conseguido la sintesis de la fluorita y de la wagnerita, aquélla por via himeda, y de estar demos- trado que en la accion de ciertas sales alcalinas sobre algu- nos minerales fiuoriferos se forman fluoruros alcalinos, lo (1) Conviene tener en cuenta, tratdindose del primer modo de formaci6n de los fos- fatos, y por lo que atane 4 los equilibrios quimicos en la génesis de los minerales, que en muchos casos, como M. Laurence Smith lo demostr6 para la mezcla de carbo- nato cilcico y fosfato sddico (Chem. Gazette, num. 57, pig. 100), la descomposicién es incompleta. 142 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (30) cierto es que nada sabemos atin del mecanismo general de las transformaciones quimicas de los minerales en cuestién. Otro tanto puede decirse respecto al boro. La experiencia sintética de M. Gramont, el cual obtuvo la boracita al estado cristalino calentando con pequena porcién de agua una mez- cla de borax y cloruro magnésico, es sdlo un caso particular referente 4 un mineral de constitucién sencilla. que no guarda punto de comparacién con la mucho mas compleja, y en rea- lidad desconocida, de la datolita, axinita, turmalinas, etc. Re- cordaremos 4 nuestro propdsito que la introduccién del boro en los minerales se atribuye al acido bérico y los boratos, al cloruro y fluoruro de boro. En el caso del fluor y del boro se encuentran otros elemen- tos raros en la naturaleza, como el selenio, teluro, molibdeno, turgsteno, urano, etc., cuyos minerales se han reproducido en algunos casos en el laboratorio, pero cuya historia no es me- nos desconocida. Por su rareza relativa estos elementos no juegan un papel de importancia en los procesos pseudo- morficos. Finalmente consignaremos aqui, por constituir hechos de mucho interés minerogénico y mostrar ciertas metamorfosis de los silicatos que pueden ayudar a la interpretaciOn de algu- nos fendmenos de pseudomorfismo quimico, las experiencias de MM. C. y G. Friedel relativas 4 la accién de los alcalis sobre la moscovita. Calentando el polvo de este silicato con disolu- ciones alcalinas a la temperatura de 500°, se observaron entre los productos formados cristales de nefelina y sodalina. Las modificaciones mas interesantes que en la composicion y constitucién quimica de los minerales provocan los diversos agentes minerogénicos son, sin duda alguna, las debidas a la intervencidn de los silicatos y de las disoluciones de silice. Dado el numero considerable de los minerales silicatados, este grupo de alteraciones, principalmente las que revelan la pér- dida 6 entrada de la silice en la molécula, y sabido la escasez relativa de resultados experimentales capaces de explicar sa- tisfactoriamente sus mutuos cambios, puede comprenderse facilmente que la cuestidn esta atin en sus principios , no obs- tante los esfuerzos considerables realizados por mineralogistas y quimicos. Sin embargo, por la frecuencia con que se hallan en las aguas minerales tanto la silice como los silicatos alcali- (31) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 143 nos, mencionaremos, con la limitacidn propia de este breve trabajo, algunas observaciones que atestiguan de una manera positiva metamorfosis que con mucha probabilidad se realizan en la naturaleza y experiencias de caracter analitico y sinté- tico que arrojan bastante luz sobre las pseudomorfosis por via humeda de esta clase de compuestos. Una de las sintesis mas elegantes y demostrativas que posee la minerogenia de los silicatos es la del berilo realizada por Traube. Consiste en precipitar por el metasilicato sédico una mezcla de disoluciones de sulfato de glucinio y de la misma sal de aluminio. El producto amorfo obtenido cristaliza por fusion en el anhidrido bérico. Friedel y Sarasin obtuvieron cristales de ortosa mediante la accion de una disolucion de silicato potasico sobre la alumina, sintesis que manifiesta la introduccién directa de la allimina en la molécula de los silicatos; y que ilustra algo sobre las pseudomorfosis de silicatos aluminosos sobre otros no alumi- nosos. La formacion de carbonatos alcalinos y silicatos ferrosos merced a la reaccién entre los silicatos alcalinos y el carbo- nato ferroso, conduce a los silicatos de protdxido de hierro y otras bases, como las tierras, si éstas se encuentran en la diso- lucién; no se han precisado bien, sin embargo, las circunstan- clas especiales que en este proceso puedan concurrir, pero es probable que a él deban su origen muchos de los silicatos ferrosos naturales. Operando con el sulfuro ferroso artificial cristalino y el sili- cato alcalino, nosotros hemos observado, después de mantener en contacto ambas substancias durante veinte meses, la for- macion de cristales de sulfato potasico y de dos productos dis- tintos que contenian silice, hierro y potasio (1). Las disoluciones carbénicas de carbonato ferroso, tan fre- cuentes y conocidas en las aguas minerales, actuan sobre los silicatos aluminosos, segtin los profesores Roth y Credner (2), produciendo silicatos de alimina y 6xido ferroso. Los mismos autores afirman que las disoluciones de sulfato y cloruro cal- (1) Contribuciones a lu sintesis de los silicatos de protozido de hierro. (AN. DELA Soc. ESP. DE HIST. NAT., tomo xxIII, Actas./ ; (2) Traité de Géol. et de Pal., trad. par E. Monier, 1879, p. 192. 144 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (32) cico y los correspondientes compuestos de magnesio dan con los silicatos de alimina compuestos naturales, tales como la serpentina y el talco, y originan las pseudomorfosis del fel- despato, augita, hornblenda y turmalina. Como metamorfosis interesantes debidas 4 la accién de los silicatos alcalinos sobre combinaciones naturales complejas, debemos mencionar aqui también, como datos de importancia para el conocimiento de la historia de algunas combinaciones silicatadas, la observada por Lemberg haciendo actuar el sili- cato sédico sobre la eleolita, en cuya accién se forma un pro- ducto que ofrece la composicién de la cancrinita, con la dife- rencia de la sustitucién de Si O, Nag a CO, Nay; la transforma- cion de la okenita en apofilita cuando se la calienta con sili- cato potasico disuelto a 200°, segun Doelter; y, finalmente, la produccidn de cristales de ortosa, sodalita y un producto que tiene la composicién de la anfigena, observada por MM. C. y G. Friedel en la accion de los silicatos alcalinos sobre las micas. No daremos por terminado el desalinado cuadro de la accion de los diversos agentes quimicos sobre los minerales que aca- bamos de bosquejar sin senalar el importante papel que en la evolucién de los minerales desempenan las substancias orga- nicas, entendiendo con esta denominacidn, no tan sdlo aque- llas combinaciones carbonadas constituyentes de los érganos y tejidos de los animales y los vegetales, sino también las que de éstas derivan en virtud de procesos destructivos quimicos 6 bioldgicos. En general las substancias organicas se compor- tan como reductores en los procesos minerales, y mas espe- cialmente parecen constituir vehiculos capaces de introducir nuevos elementos formando compuestos de caracter transito- rio, por cuanto su estabilidad es débil (1). Las substancias or- ewanicas que no constituyeron depositos de fecha geoldgica mas 6 menos reciente, mezcladas 4 los materiales pétreos de sedimento quimico 6 mecanico operando lentos procesos, in- tervienen merced a la infiltracién de las aguas superficiales, (1) Sirva de ejemplo, por lo que al origen de los silicatos de protoxido de hierro se refiere, la hipétesis emitida por Sterry Hunt (Mineral Physiology and Physiography. New York. 2. edicién, 1889), segtin la cual las substancias orgdnicas en presencia de las sales de hierro producen sales ferrosas de Acidos orginicos, las cuales son el ma- nantial por excelencia de las disoluciones ferrosas. (33) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 145 las cuales contienen siempre una cierta porcidn de productos resultantes de las alteraciones espontaneas 06 fortuitas de los restos procedentes de los seres organizados (1). Es bastante considerable el numero de minerales que en opinidn de autorizados gedlogos y mineralogistas deben su origen mas 6 menos directamente a las materias organicas (2). Sin ir mas lejos, los hierros de pantano, segun Lenft, las piri- tas de los bancos de hulla. los cristales de cuarzo del terreno carbonifero en el concepto de M. de la Vallée-Poussin, los sili- catos ferrosos de via humeda en general, segtin Sterry Hunt, y la glauconita, en particular, como M. Cayeux opina (3) y el Sr. Calderén y nosotros hemos sostenido (4), los fosfatos de los terrenos no cristalinos, que a juicio de M. Armand Gautier (5) se deben a la concentracion del fosforo de origen organico, el cual en virtud de la fermentacion bacteriana de las materias organizadas atraviesa dos fases, una primera de reduccién en virtud de la alteracién espontanea, y otra de oxidacién debida al aire y 4 los fermentos aerobios; esta ultima da como resul- tado la transformacion de la totalidad del fésforo en acido fos- forico. Pues bien, todas estas hipotesis y opiniones se hallan de acuerdo para poner de relieve el hecho transcendental que consignamos de la intervencidh de las materias organicas en los procesos evolutivos de los minerales, y por tanto, y mas especialmente, en los fendmenos de pseudomorfismo. Para terminar nuestras consideraciones acerca de los agen- tes del pseudomorfismo quimico, una vez referidas las expe- riencias fundamentales capaces de dar cuenta de gran numero de las alteraciones que seguidamente vamos a consignar, de- (1) Por lo que toca 4 las aguas minerales, son instructivos en este concepto los re- sultados de un analisis practicado por Mr. Treadwell del agua mineral de Syrembad (Archiv. der Pharm., t. 231, p. 579). Dicho analisis arroja la cifra de 0,000285 por 100 de Acido propidnico. (2) No nos referimos aqui 4 la formacién de minerales mediante procesos exclusi- vamente biolégicos, como se admite, por ejemplo, respecto 4 Ja creta y la silice dia- tomacea. (3) Notes sur la glauconite. «Ann. de la Soc. géol. du Nord.» 1892. (4) Contribuciones al estudio de la glauconita. (AN. DE LA SOc. ESP. DE HIST, NAT., tomo xx11, 1893.) Algunos puntos de este trabajo se hallan de acuerdo con otros pos- teriores de M. Cayeux respecto al origen del mineral en cuestion. (Contribution a étude micrographique des terrains sédimentaires. Lille, 1897.) (5) «Bull de la Soc. chim. de Paris», 3¢ série, t. 1x-x, nim. 23, p. 884. Nosotros dimos noticia 4 la Sociedad de este trabajo en los ANALES, 2.° serie, tomo xxIII. ANALES DE HIST. NAT.—XXVIIIL. 10 146 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (34) bemos senalar la importancia probable que en ellas corres- ponde a la electricidad, ya se manifieste ésta como causa 6 efecto de la accién quimica, ya como un dinamismo electrote- lurico. Atribityase 4 la electricidad uno 6 otro origen, no es en ningtin caso menos manifiesta su intervencién, que ya el ingeniero Sr. Fernandez de Castro concibié de una manera tan brillante como original (1); y en verdad que no debe pasar ésta desapercibida para el investigador que trate de esclarecer toda la complexidad de las causas que concurren a la forma- cién de los minerales. Ora se consideren los yacimientos de los minerales como grandes masas mas 6 menos conductoras sujetas 4 corrien- tes eléctricas, ora como depdsitos metaliferos sueltos aisla- dos por las rocas que los encajan, y en donde se alojan subs- tancias susceptibles de desarrollar corrientes eléctricas en las aguas que los banan, las cuales cargadas de sales constitui- ran el electrolito, ya como fuentes de energia quimica trans- formable en manifestaciones eléctricas, 6 ya, por Ultimo, como masas conductoras no homogéneas en donde las variaciones de temperatura originen corrientes termoeléctricas, es lo cierto que ofrecen siempre desde el punto de vista de la evolucién de los minerales inagotable caudal de interesantes problemas aun por resolver. Numerosos son los hechos producidos probablemente por las acciones electroquimicas y capaces de ilustrar los conocimien- tos minerogénicos. Entre ellos figuran muchas de las expe- riencias sintéticas realizadas por Becquerel, de las cuales se ha citado alguna en nuestras anteriores paginas, y a ellos también se refieren otras comprobaciones importantes, como la génesis de los sulfuros de plomo y plata por via electroca- pilar, la formacién de cristales de amalgama por la accién continuada del cloruro mercurico sobre una lamina de plata, la produccién de una materia vitrea andloga al diasporo por electrolisis de una disolucion de aluminato potasico, segun el mismo Becquerel, la del bidxido de manganeso por electrolisis de las disoluciones concentradas de sulfato manganoso, em- pleando la menor fuerza electromotriz posible (2), y otros mu— (1) Discurso de recepcion en la Real Academia de Ciencias de Madrid. (2) D. ToMmasi: Trait. théor. et prat. d’électrochimie. 1890. (35) Chaves.— ENSAYO DE FISIOLOGIA MINERAL. 147 chas sintesis, en fin, que abogan en pro de la teoria que pu- diéramos Namar electrominerogénica. En resumen: las alteraciones quimico-pseudomorficas en- cuentran su explicacién inmediata en el concurso de cuatro agentes concomitantes distintos, a saber: La accion quimica. El calor. La presion. La electricidad. ay whi ete y ih! e Jol: de aL A tic oH Waa pee un C00} at Ta) Ur ad (ay ni fafiaitoals af _ —~. lO Dae aa. tee a supeiae © my * Ae 4 mesh ae re tolia aea trina Git ine. -). wena - a xtmpas - ie, ere ‘ev pe*ahes 6 : Sat =” : ht 0 a - ied ~« ’(a sc ah Ge 3H i “rye Mice. y ~ see paren. ESTUDIOS PRELIMINARES PARA LA FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES, POR D. MARCELO RIVAS MATEOS. (Sesion del 9 de Abril de 1896.) (Continuacion) (1). CLASE DIGOTILEDONEAS. SuscLasE Apétalas superovarieas. ORDEN SALICIDAS. FaminiA Salicaceas. Salia alba L.=Sauce blanco.— "specie bastante frecuente en las orillas de los rios y arroyos; Derriscadero, Lance de la Mora, Berbegones , Cobacha (Tajo), Bazagona, arroyos del valle de Plasencia y otros muchos sitios. Fl. Marzo, Abril. S. fragilis L.— Especie menos frecuente que la anterior, en- contrandose por lo general individuos aislados en Gredos, Va- lle de Plasencia, Serradilla. Fl. Marzo, Abril. S. triandra L..—Comiun en las colinas septentrionales, Valle de Plasencia, toda la cuenca del Tietar hasta el Tajo, Gargan- ta de Serradilla, El Marco (Caceres). Fl. Marzo, Abril. S. cinerea ..=Za0, Zaéta, Sauice.-—Muy comun en los valles, y sobre todo en las orillas de los rios y arroyos de toda la pro— vincia, Caceres, Garganta de Serradilla, Valle de Plasen- cia, etc. Fl. Febrero. (1) Véase el tomo xxvi, pag. 177, y xxv, pag. 229 de estos ANALES 150 ANALES DE HISTORIA NATURAL. 70) S. oleefolia Vill.—Se halla salpicando los sotos de casi toda la cuenca del Tajo (Berbegones, Lance de la Mora, Puente Mantible, Luria). De la cordillera central sdlo poseemos un ejemplar recogido por el Sr. Rivas y Santos junto a la portilla de la Garganta (Serradilla). Fl. Marzo, Abril. S. caprea L.—Especie bastante frecuente en los pinares y robledales de la Bazagona, Valle de Plasencia y Gredos. Fl. Enero, Febrero. S. aurita L.=Zad.—S6lo hemos hallado esta especie en los arroyos de Barbaén y Barbaoncillo, y siempre en escasos y muy dispersos ejemplares. Fl. Mayo. S. viminalis L.=Mimbrera, Mimbres.—Muy comun en las margenes de los arroyos y rios, Serradilla, Valle, Caceres, etc. Fl. Marzo. S. purpurea L.==Za0.—Es, entre los sauces, uno de los mas comunes en la provincia, en donde contribuye en gran parte a formar los sotos. Tajo, Tietar, Salor, Almonte y otra multi- tud de rios y arroyos. Fl. Abril. S. nigricans Smith.—Ya indicamos en los ANALES DE LA So- CIEDAD ESPANOLA DE HISTORIA NATURAL el haber comprobado la indicacién de Schousboé, es decir, que nosotros hemos hallado esta especie en Caceres y Bazagona. Fl. Mayo. Populus alba C.=Chopo, Alamo blanco.—Siempre le hemos visto aislado, pero bastante frecuente en los rios y arroyos de la parte septentrional de la provincia, Valle de Plasencia, Tie- tar, etc.—F]. Abril. P. canescens Smmith.—Esta especie, 6 subespecie, segun dicen algunos botanicos, es bastante escasa en la provincia, habién- dola sélo visto en el Valle del Tietar (Chiquero, Porquerizo). Fl. Abril. P. tremula L.—Alamo, Chopo temblén.—Se encuentra en ejemplares aislados y poco frecuentes en la Bazagona y restos del Valle del Tietar, mas comin en el Valle de Plasencia. Fl. Febrero. P. nigra L.=Alamo y Chopo negro.—Especie muy comin en las orillas de los rios y arroyos; Plasencia (Isla), Walle de Pla- sencia, riberas del Tamuja, setos del Tajo (Orinal de la Virgen, Berbegones), riachuelos de Caceres y demas parajes propios dle estas especies. Fl. Abril. (71) Rivas Mateos.— FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 151 Famiuia Celtidaceas. : Celtis australis L.=Ojaranzo, Almez.—Especie muy frecuen- te en los valles y cuencas de los rios; Valle de Plasencia, Tie- tar (Bazagona, dehesa de Mirabel, Chiquero, Portilla del Tie- tar, etc.). Donde hemos visto gigantescos ejemplares ha sido en el Orinal de la Virgen (Tajo). Fl. Abril. FamiItiA Ulmaceas. Ulmus campestris Smith. Alamo, dlamo negro, Negrillo, Olmo.—¥recuente en las hondonadas y sitios htiimedos de Se- rradilla, Plasencia, Canaveral, Coria, Trujillo, Caceres, etc. Bl Beprero. Famitia Urticaceas. Urtica wrens L.= Ortigas, Pica manos, Ronchonas.— Muy co- mun junto a las praderas y sitios donde hay substancias nitro- genadas. Fl. Abril, Julio. U. pilulifera L.=Ortiga bolera, orliga de vio.—Frecuente en las inmediaciones de Caceres (Marco), Isla de Plasencia, De- rriscadero y portilla del Tajo. Fl. Junio. U. dioica L.=Ortiga grande, ortiga de pantano.—Muy comin en la orilla del Tietar (Bazagona), Jerte (Isla de Plasencia), arroyos y lugares de la mayor parte de la provincia. Fl. Junio. Parietaria lusitanica L.—Especie frecuente en la Bazagona y alrededores de Caceres. Schousboé la indica en Trujillo y Navalmoral de la Mata. Fl. Junio. P. erecta Mert. Mariquillas, Parietaria.—Muy comin en las paredes. Fl. Abril. P. diffusa Mert.—P. oficinalis Lm.=P. judaica DC.—Tan comun 6 mas que la especie anterior. Fl. Abril. FamitiA Cannabinaceas. Humulus lupulus L.=Lipulo, Pina pintada, pina Sofa.— Ks- pecie bastante frecuente en los sotos del Tietar (Chiquero, Por- tilla, Bazagona) y sitios pantanosos del Jerte (Plasencia, Isla). 152 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (72)- Los brotes tiernos son bastante buscados para comerlos en en- salada 6 solos. Fl. Junio. Cannabis sativa L.—Canamo.—Nosotros hemos podido obser- var esta especie subespontanea en la falda N. de la cordillera central de San Pablo (Mirabel, Perdiguera). Fl. Junio. FamitiA Artocarpaceas. Ficus carica L.= Higuera loca, Higuera.— "specie muy co- mun en los sitios escarpados, paredes, etc., de toda la provin- cia, Caceres, Serradilla, Plasencia. En la torre de la iglesia de Mirabel existe en la cupula una higuera muy desarrollada, que dicen pasa de un siglo de existencia. Fl. Mayo. FamILIA Ceratofilaceas. Ceratophyllum demersum L.—Comiiin en las aguas estanca- das de Caceres, pedreras del ejido de Serradilla y arroyo lugar, laguna de Arroyo del Puerco junto a la via férrea de Caceres. Fl. Julio. C. submersum L.—Ksta especie, que se distingue de la ante- rior por tener las lacinias de las hojas poca 6 nula denticula- cién y la nuececilla sin espigas, es tan frecuente en los mis- mos sitios que la anterior especie, charcos del Tietar. Fl. Ju- lio, Agosto. ORDEN QUENOPODIDAS. FAMILIA Quenopodiaceas. Chenopodium Botrys L.= Bien granada, Té.—¥specie muy frecuente en toda la cuenca del Tajo, arenales del Derriscade- ro, arenales del Tietar. Fl. Junio. Ch. ambrosioides.— Mastranzo del Té, Te, Hierba fatua.— Muy comun en las huertas de naranjos de Santa Catalina, Abuelo, Hoyo, como asimismo en la dehesa de Marijuan, Isla de Plasencia, Virgen de la Montana de Caceres. Fl. Septiem- bre.—E] vulgo hace con las hojas de esta especie infusiones teiformes muy recomendadas como estomacales. Una cosa analoga hacen con la especie anterior, aunque no goza de tanta fama como ésta. 73) Rivas Mateos.— FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 153 Ch. album L.=Blanquejos, Mastranzo blanco, Ceniglos, Palo- meras, Hierba de la ceniza, Payasos, Juaneques.-- Con estos nombres condcense por el vulgo varias especies de este g@énero, aunque ésta es la que de preferencia los Neva, ya la variedad a commune Moq. (Ch. candicans Lamk.), como la var. 8 viride Moq. (Ch. viride L., Ch. concatenatum Thuill.), ambas a dos tan comunes en los alrededores de los pueblos y escombros. Fl. Junio. Ch. opulifolium Schrad.—Aunque no tan comun como la es- pecie anterior, es frecuente en los alrededores de Caceres (San Blas, Marco), Plasencia (San Antén, alrededores de la esta— cidn). Fl. Agosto. Ch. hybridum L.—Comiin en la dehesa de Marijuan, huertos de la fuente, alrededores de Canaveral. Fl. Julio. Ch. rubrum L.—Especie muy abundante en la cuenca del Jertes, Plasencia, Galisteo, arroyos de la Losa y Madronillo (Casas de Millan). Fl. Agosto. Ch. murale L.—Especie muy comun en los barrancos, escom- bros, paredones viejos, etc., de toda la provincia. Fl. Agosto. Ch. Vulvaria L.=Ch. olidum Curtz.— Mas comtin que la es— pecie anterior; entre los paredones, escombros, etc. Fl. Agosto. Ch. Bonus-Henricus L.—En los barrancos de la cordillera central de San Pablo, sierras de Gata y Dios Padre. Fl. Sep- tiembre. Beta maritima L.—Especie frecuente en las cuencas del Tajo, Calerizo de Caceres y alrededores de la ermita de Santa Ana (Serradilla). Fl. Junio. B. vulgaris L.—Lo mismo la var. « cicla (Acelga) como la var. 8 rapacea (Remolacha) son muy cultivadas en las huertas de Caceres y Plasencia, razon por la cual es frecuente encon- trarse con estas especies en los alrededores de las huertas y orillas de los arroyos proximos. Fl. Agosto. Blitum virgatum L.—Bledos, Berrinchines.—Uspecie frecuen- te en los terrenos cultivados de Caceres y Plasencia. Fl. Julio. A triples glauca L.—Frecuente en los arenales del Tajo, bar- cas de Alconeta, puente Mantible, etc. Fl. Septiembre. A. Halimus L.—Sélo hemos podido observar algunos ejem- plares en la subida a la Virgen de la Montana (Caceres). Fl. Septiembre. A. hastata L.—¥specie muy abundante en los alrededo- 154 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (74) res de Plasencia, Herguijuela de Leal, etc. Fl. Septiembre. A. patula L.—Todas las var. genuina, muricata y angustissima, son muy comunes en toda la provincia, y con especialidad en la parte meridional (Caceres, Arroyo). Fl. Junio, Septiembre. A. hortensis L.—Armuelles.—Es muy frecuente en los terre- nos cultivados, praderas y valles, Plasencia, SerrejOn, Logro- san. Fl. Julio. Spinacia glabra Mill.—Fspinaca.—Muy cultivada en las huer- tas, y por tanto no es raro verla subespontanea en los campos limitrofes. Fl. Julio. S. oleracea Mill. Hspinaca.—Se encuentra en iguales con- diciones que la anterior. Fl. Julio. Camphorosma monspeliaca L.=Alcanforada.—Suele encon- trarse en los campos de Caceres, pero muy escasa (Paseo alto), subida a la Virgen del Puerto (Plasencia). Fl. Septiembre. Salsola vermiculata L.—=Planta jabonera, Barrilla.—Ks entre todas las barrillas lamas comin, aunque no es mucha su pre- sencia, pues esta reducida al Calerizo de Caceres y alrededores de Arroyo y Trujillo.—F1. Julio. S. hali Ten. Barrilla. —Se encuentra menos frecuente en los mismos sitios que la especie anterior. Fl. Julio. S. soda L.=Barvrilla.—De esta especie sdlo hemos visto algu- nos ejemplares en las Minas de Caceres. FI. Julio. Sueda maritima Dumort.—La var. ~ spicata Willk., Unica que hemos encontrado, se halla en el cerro de Santa Barbara (Plasencia). Fl. Agosto. Salicornia herbacea L.—¥El Sr. Rivas y Santos encontré esta especie en los tomillares limitrofes a Serradilla. Fl. Octubre. FamiILtiA Amarantaceas. Amaranthus retroflecus L.—Se encuentra en los campos pré- ximos a Caceres é inmediaciones de Serradilla. Fl. Junio. A. Blitum L.—Especie bastante comin en toda la provincia, Bazagona, campos de Caceres y Trujillo. Fl. Agosto. A. albus .=Mastrancillo.—Especie muy comin en los alre- dedores de Serradilla, Caceres. Fl. Septiembre. Polycnemum arvense L.—Comuiin en las orillas de los arroyos de Canaveral, campos é Isla de Plasencia, Monasterio de Yuste. Fl. Julio. or el (75) Rivas Mateos.—FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. iF FAMILIA Fitolacaceas. Phytolacca decandra L.=Carmin, Carminera.-—Uspecie muy comin en las huertas de naranjos, Canaveral, Valencia de Al- cantara, Alcuescar, orilla de los rios y arroyos. Fl. Agosto. Famitia Poligonaceas. Rumex crispus L.==Acedera, Vinagrera.—Especie bastante comun en la provincia, Calzadilla, Guijo de Coria, etc. Flo- rece en Mayo y Junio. R. Hydrolapathum Huds.— Hemos podido recoger algunos ejemplares en lo alto del Valle de Plasencia, junto al naci- miento del rio Jerte (Tornavacas). Fl. Junio. R. conglomeratus Murr.—En el valle del Tietar (Bazagona y dehesa de Mirabel). Fl. Junio. R. pratensis Mort.—En las huertas de Caceres y campos de Arroyo, Pedroso, Serradilla. Fl. Julio. R. pulcher L.—Muy comtin en el Valle del Tietar, arroyos lugares de Serradilla, Plasencia. Fl. Julio. R. palustris Sm.—En la Isla de Plasencia. Fl. Julio. Rk. bucephalophorus L.—Muy comin en los valles y praderas de toda la parte septentrional. Fl. Mayo, Agosto. R. Acetosella L.=Acerones. Vinagrera.—Especie muy comun en los paredones y praderas de toda la provincia. Fl. Abril. Rk. Acetosa L.—Tan comutn como la especie anterior, encen- trandose en los mismos sitios. Fl. Abril. R. tingitanus L.— specie muy vulgar en los prados de Se- rradilla, huertas de Trujillo y Caceres. Fl. Mayo. R. papillaris Boiss. et Reut.—Sdlo poseemos algunos ejem- plares recogidos por el Sr. Fernandez Lancho en el camino de Casas de Millan 4 Serradilla. Fl. Mayo. R. scutatus L.=Guitarras.—Us frecuente en las montanas septentrionales, como asimismo en las praderas y cerros; Valle de Plasencia, Bazagona, Serradilla, Miravete. Fl. Abril. R. induratus Boiss. et Reut.—En las praderas de la cordillera central de San Pablo, Serradilla, Montanchez y otros puntos de la Oretana. Fl. Julio. R. Patientia L.—Se encuentran algunos ejemplares en el 156 ANALES DE HISTORIA NATURAL (76) arroyo del Marco (Caceres) é Isla de Plasencia. Fl. Junio. Polygonum aviculare L.=Sanguinaria mayor.—Centinodia.— La variedad tipica (P. centinodium Lamk.) es comunisima en los parajes himedos y encharcados de toda la provincia. Flo- rece en Junio. P. Bellardi All.—Bastante frecuente en los prados y sitios humedos de la provincia, Caceres, Plasencia, Hervas. Fl. Julio. P. hydropiper L.= Resquemona, Pimentera de agua.—Muy comun en las lagunas y sitios encharcados de toda la parte septentrional de la provincia, Hervas, Aldeanueva, Plasencia, Serradilla. Fl. Agosto. P. Persicaria L.= Persicaria.—Frecuente en los arroyos y sitios htumedos de la mayor parte de la provincia, Caceres, Pla- sencia. Fl. Junio, Septiembre. P. lapathifolium L.=P. turgidum Thuill.—En los arroyos de Barbaén y Barbaoncillo (Malpartida, Serradilla). Fl. Agosto. P. Bistorta U.= Bistorta.—Uspecie bastante frecuente en la sierra de Gredos y Dios Padre; con menos frecuencia se en- cuentra en la sierra de Guadalupe. Fl. Mayo. P. Convolvulus L.— En los vallecitos de la sierra de Tejadi- la, muy proximo a la Garganta de Serradilla. Fl. Agosto. ORDEN PROTEIDAS. FAMILIA Paroniquiaceas. Ortegia Hispanica L.—Se encuentra muy comun en toda la provincia, Caceres, Plasencia, Trujillo, Coria, etc. Fl. Junio. Leflingia Hispanica L..—Comiun en la Bazagona, Valle de Plasencia, vegas del Salor. Fl. Abril. Polycarpon tetraphyllum L.—Heros podido recoger la varie- dad $8 diphyllum (P. diphyllum Cav., Paronychia striata DC.) en la Cruz del Cancho, Castillo de Mirabel y La Silleta (San Pablo). La forma tipica es muy comun en la base de los muros, barrancos y alrededores de los pueblos. Fl. Junio. Paronychia cymosa Lamk.—Suele encontrarse en los sitios montuosos y escarpados, Castillo de Mirabel, cuencas del Tajo, subida al puerto de Miravete, Caceres. Fl. Abril. P. argentea Lamk.—Sanguinaria, Sanguinaria menor.—Co- mtin en la orilla de los caminos, barrancos, praderas de la (77) Rivas Mateos.—FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 157 mayor parte de la provincia, Caceres, Plasencia, Trujillo, Co- ria, etc. Fl. Abril. Goza entre el vulgo de propiedades maravi- llosas, como son la aminoracién de sangre y cura de todas las enfermedades de la orina. P. nivea DC.—Sdlo hemos podido encontrar esta especie en el Valle de Plasencia. Fl. Junio. P. capitata Lamk.—En la subida al cerro del Calamoco (ca- mino de Serradilla 4 Plasencia). Fl. Junio. P. polygonifolia DC.—Ks bastante frecuente en los vallecitos de la parte baja de Gredos (faldas del puerto de Madrigal). Fl. Agosto. ' Tllecebrum verticillatum L.—-Especie muy comin entre la hierba, vallicales, etc., de la regidn central, Gredos, Plasen- cia, Bazagona. También la hemos recogido en un valle pré- ximo al Castillo de Mirabel. Fl. Agosto. Herniaria glabra L.—Muy comin en los arenales y praderas de la Bazagona, Plasencia y otros muchos puntos de la provin- cia. Fl. Junio. HT. hirsutu L.— specie tan vulgar como la anterior, encon- trandose con preferencia en los sitios aridos, Fl. Junio. HT. cinerea DC.—Muy comutn en los caminos y praderas . DIALIPETALAS INFEROVARIEAS. SERIE ISOSTEMONA. FamitiA Umbeliferas. Trisu Daucineas. Daucus Carotta L.=Zanahoria.—Crece en los prados de la mayor parte de los pueblos: Serradilla, Plasencia, Caceres, etc. Fl. Mayo, Octubre. (137) Rivas Mateos.— FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. © 217 D. setifolius Desf.—Crece en los montes de la Jibe, Montan- chez y cordillera central de San Pablo. Fl. Agosto. D. crinitus Defs.— Habita en los alrededores de Caceres, Pa- seo Alto y Virgen de la Montana. Fl. Julio. Orlaya grandifora Hoffm.—Crece con abundancia en las cuencas del Tajo, Canaveral, Casas de Millan, Caceres, etc. Fl. Abril, Julio. 0. platycarpos Koch.—Comun en los sembrados de toda la provincia. Fl. Abril, Junio. Durieua Hispanica Boiss. et Reut.—Habita en los montes de Serradilla, Jibe, Caceres, Valle de Plasencia. Fl. Mayo. D. juncea Willk.—Bajo la fe de Willkomm publicamos esta especie encontrada por él en el Valle de Plasencia. FI. +. Trisu Caucalineas. Turgenia latifolia Hoffm.—Crece entre los sembrados de ce- reales de la mayor parte de la provincia. Fl. Abril, Julio. Caucalis daucoides L.—¥s una especie muy comun en los sembrados: Plasencia, Caceres, Serradilla, etc. Fl. Abril. C. leptophylla L.—Pempeniila, Agarrones.—Crece en los mis- mos sitios que la especie anterior. Fl. Abril, Junio. Torilis Anthriscus Gm.— Habita en los campos limitrofes a Villa Real de San Carlos, Bazagona, etc. Fl. Abril, Junio. T. nodosa Geertn.= Tordylium nodosum L.—Comin en toda la provincia. Fl. Mayo, Junio. T. Helvetica Gm.—Caucalis Helvetica Jacq.—Crece en los montes y praderas del distrito de Hoyos. Fl. Junio, Agosto. Trisu Coriandreas. Coriandrum sativum L.=Cilantro.— "Es cultivado en los jar- dines, por lo cual no es dificil observar algunos ejemplares escapados del cultivo en los sitios contiguos, El Marco de Ca- ceres, Garganta de Serradilla, etc. Fl. Junio, Agosto. Biflora testiculata DC.=Coriandrum testiculatum .—Crece en el valle Helechal de la cordillera central de San Pablo. Flo- rece en Abril, Mayo. 218 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (138) Trisu Bleoselineas. Eleoselinum faetidum Boiss.=Thapsia fetida L.—Crece en terrenos cultivados, sobre todo de la regidn central, Bazagona, Jarandilla, Aldeanueva del Camino y Plasencia. Fl. Junio. EL. Lagasce Boiss.=Thapsia tenuifolia Lag.—Habita en la sierra de Guadalupe y Montanchez. Fl. Mayo, Agosto. Margotia laserpitioides Boiss. = Laserpitium thapsie forme Brot.—Crece en las inmediaciones de Canaveral, Casas de Mi- llan, etc. Fl. Mayo, Agosto. Trisu Tapsieas. Thapsia villosa L.==Caiaheja.—Comin la var. « disecta en las praderas y barrancos de Serradilla, Plasencia, Torrejon el Rubio, etc. Fl. Agosto. T. decussata Lag. (7. garganica L. var.) —Esta especie ha sido ya indicada por Palau en Extremadura, pero sin citar localidad determinada. Nosotros la hemos visto en el valle de Plasencia (Tornavacas). Fl. Julio, Agosto. Laserpitium latifolium L.==Cominos risticos.— Habita en los montes de Ja sierra de Hervas, Gredos y cordillera central de San Pablo. Fl. Julio, Agosto. L. Siler L.=L. montanum Lamk.=Siler montanum Crantz.= Ligusticum garganicum Teu.—Crece con la especie anterior en el Valle de Plasencia y sierra de Gredos. Fl. Julio, Agosto. Trisu Silerineas. Siler trilobum Scop.= Angelica aquilegifolia DC.=Laserpi- tium aquilegifolium Jacq.—Especie hasta hoy sdlo hallada en los vallecitos de la parte alta y montana de la sierra de Gre- dos. Fl. Junio, Julio. Trisu Angeliceas. Angelica sylvestris L.==Imperatoria sylvestris DC.= Selinum sylvestve Crantz.—Habita en toda la parte alta de la sierra de Gredos y Guadalupe (montes de Toledo). Fl. Julio, Agosto. (139) Rivas Mateos.— FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 219 Selinum carvifolia L.—Angelica carvifolia Spr.—Crece en la parte baja de los montes de la Jibe, sierra de San Vicente (460 m.) y en los cerritos préximos a Herreruela. Fl. Julio. Trisu Peucedaneas. Anethum graveolens L.=Pastinaca Anethum Spr. ELneldo.— Es una especie muy comun en toda la provincia. Fl. Junio, Julio. A. segetum L..=Meum Segetum Guss.—Menos comin que la anterior especie, es muy constante en los mismos sitios, bar- bechos y terrenos cultivados. Fl. Junio, Julio. Peucedanum stenocarpum Boiss. et Reut.—Crece en los mon- tes de la sierra de Gata y Gredos; muy escasa en la de Guada- lupe. Fl. Junio, Agosto. P. Ostruthium Woch.=Imperatoria Ostruthium L.—Crece en los montes carpetanos, subiendo hasta los 2.475 m. en la sie- rra de Gredos. Fl. Julio. P. oficinale L.—Esta especie, que es, si cabe, mas rara que la anterior, ha sido encontrada en la cordillera central de San Pablo por el Sr. Rivas y Santos. Fl. Junio, Julio. Ferula communis L.=Canaheja.— Especie muy comun en los cercados contiguos a Serradilla, en el Valle de Plasencia, montes de la sierra de Gata, etc. Fl. Mayo, Julio. F. brachyloba Boiss. et Reut.—Crece en los montes de la cor- dillera central de San Pablo y sierras de Montanchez y Gua- dalupe. Fl. Agosto. Opopanar Chironium Woch.—= Laserpitium Chironium Kjusd. =Pastinaca Opopanaz L.—Crece en los montes de la sierra de San Vicente, cordillera central de San Pablo, sierra de Gata y Valle de Plasencia. Fl. Junio. Pastinaca sativa L.—Crece en los sitios encharcados del Va- lle de Plasencia, El Marco de Caceres, arroyo Madronillo de Serradilla y en las inmediaciones de las lagunas de Trujillo. Fl. Julio, Agosto. Heracleum sphondylium L.—Comiun en el valle del Tietar, sierra del Barrao, Pasarén, Arroyo Molino y Gredos. FI. Julio, Agosto. Tordylium marimum L.= Heracleum Tordylium Spr.— Fre- cuente en la orilla de los arroyos de Serradilla, Madronillo, 220 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (140) La Losa y Barbaén, en el Valle de Plasencia. Fl. Mayo, Julio. T. apulum L.—El Sr. Rivas y Santos dice haber encontrado esta especie en el valle del Helecho (Serradilla, Mirabel). De- bido al mal estado del ejemplar, no podemos tener certeza de su existencia en la provincia, siendo asi que no lo hemos visto en ninguna otra localidad. FI. +. Trisu Seselineas. Meum athamanticum Jacq.—Habita en los montes carpeta- nos, sierra de Dios Padre y Gredos, donde sube 4 una altura de 2.495 m. proximamente. Fl. Julio. Seseli tortuosum L.—Sium tortuosum Roth.—Crece en los montes de la sierra de Guadalupe y en la subida a la Virgen de la Montana. Fl. Julio, Agosto. S. Libanotis Koch.=dA thamanta Libanotis L..=Libanotis vul- garis DC.—Crece en los montes de la cordillera central de San Pablo y en la sierra de Gredos. Fl. Julio, Agosto. Feniculum vulgare Gertn.= Hinojo.—Lo mismo la forma tipica que la var. 8 dulce C. Bauch., son muy comunes en toda la provincia. Fl. Agosto, Septiembre. Gnanthe crocata L.—Muy comin en el valle del Tietar, cam- pos-de Casatejada, Serradilla, Plasencia, Caceres, etc. Florece en Mayo, Julio. @. pimpinelloides L.—Crece en las inmediaciones del cerro de Santa Barbara (Plasencia). Fl. Abril, Mayo. @. globulosa L.= Perejiletes, Golondrinillas.—Crece en los alrededores de Serradilla (cercado de la Iglesia, La Romana). Fl. Mayo. @. fistulosa L.—Mas comtin que la especie anterior; Valle de Plasencia, Serrején, Casas de Millan, Canaveral, Serradilla, Caceres, Plasencia, etc. Fl. Mayo, Julio. @. Phellandrium Lamk.=Phellandrium aquaticum L.=£Fi- landvio.—Ademas de los individuos qne con mucha frecuencia se ven escapados del cultivo, existe espontaneo en el Valle de Plasencia. Fl. Julio, Agosto. (41) Rivas Mateos.—rLoraA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 221 Trisu Ammineas. Bupleurum rotundifolium L.—Crece en los campos de Casa- tejada, Serradilla, Plasencia, Caceres, etc. Fl. Mayo, Junio. B. angulosum ..—Crece en los altos picachos de la sierra de Gredos y en el puerto de Madrigal. Fl. Agosto. B. fruticescens L.— Muy comin en los barrancos de la cordi- llera central de San Pablo, cerca del Calamoco y Santa Bar- bara (Plasencia), Virgen de la Montana en Caceres, Paseo Alto, sierra de San Vicente y Jibe, etc. Fl. Julio, Agosto. B. paniculatum Brot.—Habita en la sierra de Montanchez vv parte baja de los montes de la Jibe. Fl. Julio. B. junceum L. =B. Gerardi Sm.—Habita en la parte meridio- nal del distrito de Plasencia, Serradilla, Mirabel, y sube en la cordillera central de San Pablo hasta lo alto de Miravete 1.176 metros. Fl. Julio, Agosto. B. semicompositum L.—Crece en las praderas de la cordillera central de San Pablo, valle del Tietar y de Plasencia. Florece en Abril, Junio. B. tenuissimum L.—Muy comin en los montes de Toledo y en la sierra de Gata. Fl. Julio. B. rigidum L.—Frecuente en los barrancos y sitios montuo- sos de la cuenca del Tajo, Serradilla y en casi todos los montes de la region central. Fl. Julio, Agosto. Sium angustifolium V..=Berras, Bervazas.— Muy comin en los arroyos, sobre todo en los de la parte septentrional. Florece en Julio, Agosto. S. latifolium L.= Berrones.—Se encuentra en los mismos sitios que la anterior especie. Fl. Julio, Agosto. Pimpinella magna V..—Crece en el Valle de Plasencia y en los campos de Serradilla, Plasencia y Caceres. Fl. Mayo. P. saxifraga L.—Crece en los mismos sitios que la espe— cie anterior y en los alrededores de Herreruela. Fl. Mayo, Agosto. _ £P. villosa Schousb.—Habita en la Isla de Plasencia, Virgen de la Montana en Caceres, Cruz del Cancho de Serradilla. Flo- rece en Julio. Bunium verticillatum God. et Gren.=Carum verticillatum Koch.=Sium verticillatum Lamk.—Crece en los terrenos mon- 222 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (142) tuosos de Garrovillas, Navas del Madrono, Herreruela, San Vi- cente. Fl. Julio, Agosto. B. Bulbocastanum L.—Habita en la sierra de Gata cerca de Perales, sierra de Gredos en los montes de Madrigal. Fl. Mayo, Julio. Amimi majus L.—En las malezas y sitios escarpados de la sierra de Béjar, alrededores de Villa Real de San Carlos, subida i la Virgen de Tiebas (Herguijuela de Guadalerma, Casas de Millan). Fl. Mayo, Julio. A. Visnaga Lank.== Escarbadientes.=Visnagas, Jaramagos, Paraguetas.— Muy comun en los cercados y demas terrenos cultivados de Serradilla, Canaveral, Casas de Millan, Garro- villa, Caceres, Plasencia, etc. Fl. Junio, Octubre. Falcaria Rivini Hort.—Sium Falcaria L.—Crece en las huer- tas y campos proximos a Casatejada, Navalmoral y Bazagona. Fl. Junio, Julio. Plychotis verticillata Dubi.=Ammi Mathioli Dalechs. —Co- muin en los campos de Serradilla, Plasencia, Caceres, etc. Flo- rece en Abril, Mayo. Helosciadium nodiforum Koch.—Muy comin en toda la pro- vincia. Fl. Junio, Agosto. Nora. Después de estos géneros corresponden en la serie los géneros Petroselinum y Apium, cuyas especies, P. sativum Hoffm. y A. graveolens L. (apio), son muy cultivadas en las huertas y jardines, razén por la cual es facil ver individuos de estas especies en los campos limitrofes. Cicuta virosa L.—=Cicutaria aquatica Lamk.=Coriandrum cicuta Roth.—Crece en los charcos y arroyos del Valle de Pla- sencia. Fl. Julio. Trisu Seandicineas. Scandia Pecten-Veneris L.Myrrhis Pecten-Veneris All. = Peines de Venus, Peinecitos.—Especie muy comun en los pra- dos y terrenos cultivados. Fl. Abril, Mayo. Sc. australis l.—Crece en los campos préximos a Cace- res, barrancos de la cordillera central de San Pablo. Florece Mayo. Anthriscus vulgaris Pers.—Scandiz Anthriscus L.—Muy co- mun en toda la provincia. Fl. Mayo, Junio. (143) Rivas Mateos.—rLOoRA DE LA PROVINCIA DE CAGERES. 223 A. neglectus Boiss. et Reut.=Scandiz infesta Jacq.—Crece en el soto del Lance de la Mora (Tajo). Fl. Junio. Conopodium denudatum Koch.—Myrrhis Bunium Spr.—Co- mun en la sierra de Gredos, Gata y cordillera central de San Pablo. Fl. Junio. C. butinoides Boiss. et Reut.—Habita, aunque muy escasa, en la sierra de Gata y Gredos (Perales, Aldeanueva de la Sie- rra, Madrigal). Fl. Agosto. Cherophyllum aureum L.=Myrrhis aurea Spr.—Fsta especie crece, segun el Sr. Alonso, en los picachos de Gredos; es muy probable sea exacta dicha indicacién , pero nosotros no hemos podido comprobarlo. Fl. +. Ch. hirsutum L.=Myrrhis hirsuta Spr.—Crece en los pica- chos de la sierra de Gredos. Fl. Julio, Septiembre. Ch. nodosum Lamk.—=Scandix nodosa L.—Crece en la Baza- gona, campos de Pasarén y en el Valle de Plasencia. FI. Abril, Junio. Trisu Smyrneas. Physospermum aquilegifolium Koch. Heiselera damecornis Lag.—Ligusticum aquilegifolium Wild.—Crece en la sierra de Dios Padre y parte baja de Gredos. Fl. Julio. Smyrrium Olusatrum U.—Muy comin en todo el Valle de Plasencia, sierra de Gredos y Guadalupe, cordillera central de San Pablo y campos contiguos a Caceres. Fl. Abril, Mayo. Sm. perfoliatum L.—Tan comun 6 mas que la especie ante- rior, buscando con preferencia sitios hiumedos. Fl. Abril, Mayo. Conium maculatum L.=Cicuta Pintorreta.— Especie muy co- mun en los bosques y arroyos de toda la provincia. Fl. Julio. Sus propiedades téxicas son muy conocidas del vulgo. Cachrys levigata Lamk.—Crece en el valle del Helecho y en los alrededores de Serradilla. Fl. Mayo. Magydaris panacina DC.=A thamanta panacifolia Spr.—Crece en los alrededores de las Navas del Madrono. Fl. Marzo, Abril. 224 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (14h) ‘lrisu Eringieas. Eryngium campestre L.==Cardo corredor, Pinchona.—Muy co- mun en toda la provincia. Fl. Junio, Julio. BE. Bourgati Gouan.=F. amethystinum Lank.—Sdlo hemos podido observar alguno que otro ejemplar en la sierra de Gata y Gredos (Montehermoso, Hermanitas). Fl. Julio, Agosto. EF. dilatatum Lamk.=F. purpuratum Sm.—Crece en los mon- tes de las sierras de Serradilla y Zapata, alrededores de la Vir- gen del Puerto en Plasencia. Fl. Junio, Julio. EF. amethystinum L.—Crece con bastante abundancia en los campos de Villa Real de San Carlos y Cilleros, buscando con preferencia los sitios encharcados. Fl. Junio, Agosto. EL. pusillum U.==#. Barrelieri Boiss.—Crece en los campos de Navalmoral de la Mata, Plasencia (San Antén) y Gamera de Serradilla. Fl. Agosto. E. tenue Lamk.= FEsterera, Pinchones de Pedreras, Violetas chaparvas.—Es una especie muy oculta en las hondonadas y sitios htimedos de Serradilla, Plasencia, Canaveral, Cace- res, etc. Fl. Junio, Julio. Sanicula Europea L.=Caucalis Sanicula Crantz.—Astrantia Diapensia Scop.—Crece en los altos de la sierra de Gredos, descendiendo hasta la parte alta del Valle de Plasencia (Tor- navacas, nacimientos del Jerte). Fl. Junio, Julio. FamitiA Araliaceas. Hedera Heliz L.=Hiedra arborea.—s frecuente en los sitios escarpados de la cordillera central de San Pablo, en los muros y sobre los arboles en los bosques de toda la sierra de Gredos, cuencas del Tajo, etc. Fl. Junio. Famitia Cornaceas. Cornus sanguined L..—=Cornejo.—Crece en los sitios montuo— sos de la sierra de Gata en el Valle de Plasencia. Segtin el se- nor Rivas y Santos se encuentra también en los montes de la cordillera central de San Pablo. Fl. Abril. (145) Rivas Mateos. —FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 225 FamitiA Grosulariaceas. Ribes Uva-crispa L.—Crece en los altos montes de la sierra de Gredos, siempre escasa y en ejemplares aislados; bajada N. del puerto de Madrigal. Fl. Julio. SERIE MERISTEMONA. FamiLiA Mirtaceas. Myrtus communis L.=Mirto, Arrayan.—Frecuente en los montes de Villa Real de San Carlos, Deleitosa, sierras de Gua- dalupe y Gata. Fl. Mayo, Junio. Famitia Granataceas. Punica Granatum L.=Granado.— Se encuentra espontaneo en los sotos del Valle de Plasencia y del Tietar. Fl. Junio. SERIE DIPLOSTEMONA. Famitia Saxifragaceas. Sazifraga stellaris L.—En los montecitos y praderas de la sierra de Gredos, junto 4 los molinos de umbria; menos fre- cuente en la de Gata, donde solo hemos podido verla en los montes de Robledillo. Fl. Julio. S. granulata L.—Muy frecuente en la region central y parte septentrional de la occidental, Plasencia, Banos, Hoyos, Valle de Plasencia, etc. Fl. Abril, Julio. S. Carpetana Boiss. et Reut.—En la sierra de Gata, Gredos y Dios Padre; baja hasta las altas cumbres de la sierra de Gua- dalupe y Montanchez. Fl. Abril, Junio. S. tridactylites L.— Es bastante comun en los campos de Se- rradilla (Gamera, Madronillo, dehesa La Voluntaria, etc.), Pla- sencia (Virgen del Puerto, cerro de Santa Barbara), Caceres, (Virgen de la Montana), etc. Fl. Marzo, Abril. S. petrea L.=S. vupestris Lapeyr.—Crece en los montes de ANALES DE HIST. NAT.—XXVIII. 15 226 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (146) la sierra de Gredos, junto al puerto de Madrigal, sierra del Barrao (Arroyo Molino y Pasaron). Fl. Julio, Agosto. S. hypnoides L.—En toda la sierra de Gredos y Gata, des- cendiendo hasta la parte baja del Valle de Plasencia y alrede- dores del caserio y ermita de la Herrera (Malpartida). Fl. Ju- nio, Julio. Parnassia palustris L.—Crece en los altos de la sierra de Guadalupe, prados de Gredos y en la bajada del puerto de Tornavacas. Fl. Julio, Agosto. FamitiA Halorageas. Callitriche platycarpa Kutz.—Hemos encontrado esta especie en el remanso de la Cobacha (Tajo) y en los grandes charcos del Tietar, Bazagona, Chiquero. Fl. Abril, Octubre. C. verna Kuatz.=C. vernalis Koch.—Charcos del Tietar y en la laguna de la dehesa La Voluntaria (Serradilla). Fl. Diciem- bre, Abril, Octubre. Myriophyllum verticillatum L.—Muy comun en todos los si- tios encharcados de la provincia, el Marco de Caceres, Plasen- cia (Jerte), Bazagona (cunetas de la via férrea). Fl. Junio, Agosto. M. spicatum L.—Se encuentra, aunque mas escasa, acompa- nando a la especie anterior. #1. Junio, Agosto. FAMILIA Litrariaceas. Lythrum Salicaria L.=Salicaria, Frailes, Varas de los diuge- les.— Muy frecuente en las vegas y orilla de los arroyos de la mayor parte de la provincia. Fl. Mayo, Agosto. L. Hyssopifolia L.—Tan comtin 6 mas que la anterior; Valle de Plasencia, Caceres, Serradilla, Hoyos, etc. Fl. Junio, Agosto. L. Thymifolia L.—Solo hemos podido encontrar esta especie en las margenes del arroyo Barbaoncillo (Serradilla) y en la orilla de uno de los regatos que afluyen en las Lagunas del Duque (Garganta de Banos). Fl. Mayo, Junio. FamitiA Enoteraceas. Epilobium palustre L.—Crece en la sierra de Gredos junto al (147) Rivas Mateos.—FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 227 poblado de Hermanitas; parte alta del Valle de Plasencia. Flo- rece en Julio. E. tetragonum L.—¥specie bastante frecuente en la regién central, cordilleras septentrionales, campos de Plasencia y Vi- llanueva de la Sierra. Fl. Mayo, Julio. E.. Carpetanum Wk.—No tenemos mas noticias que las dadas por el Sr. Alonso, que dice haberla recogido en las altas cum- bres de la sierra de Gredos. FI. +. LE. parviforum Schreb.—En los-sitios himedos y sombrios del Marco y huertas de Caceres. Fl. Julio. EF. hirsutum L..—Crece en parajes himedos de muchas partes de la provincia; Caceres, Arroyo del Puerco, Plasencia, Hoyos, Banos, Tornavacas, etc. Fl. Julio. E. spicatum Lamk.=F. angustifolium L.—Hemos recogido ejemplares de esta especie en las sierras de Gata, Gredos, soto del Orinal de la Virgen y Lance de la Mora. FI. Julio, Agosto. GAMOPETALAS SUPEROVARIEAS. SERIE ISOSTEMONA. ORDEN ASCLEPIADIDAS. Famitia Oleaceas. Ligustrum vulgare L.=Aligustre.—En la parte septentrional de la provincia, Valle de Plasencia en el soto de los Berbe- gones del rio Tajo, Garganta de Serradilla. Existe también, segun el Sr. Rivas y Santos, en la cordillera central de San Pablo. Fl. Abril. Olea Europea L. var. Oleaster DC.—Acebuche.—Es muy co- mun en la mayor parte de la provincia; Serradilla, cuencas del Tajo, Penafalcén, etc. Fl. Abril, Junio. Phillyrea angustifolia L.=Lentisca, Desollinadores, Olivetas. Muy comun en los montes de la cordillera central de San Pa- blo, sierra de Gata, San Pedro, Montanchez, etc. Fl. Abril, Julio. 228 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (148) Ph. media L..—Crece, aunque en menor cantidad, en la cor- dillera central de San Pablo, sierra de San Vicente y Jibe, parte baja de Gredos y Dios Padre. Fl. Mayo, Agosto. FAMILIA Fraxinaceas. Fracinus excelsiory L.=Fresno.— "specie comin en los rios y arroyos de toda la provincia, y con especialidad en la regién central, cuencas del Tajo, Trasierra (Serradilla), Valle de Pla- sencia, cuencas del Jerte y Tietar. Fl. Abril. F. angustifolia Valh.— Especie muy comun en las cuencas del Tietar, donde forma dilatados sotos; Tajo, Serradilla, etc. Fl. Mayo. ‘ FAMILIA Jasminaceas. Jasminum fruticans L.— Bastante abundante en los bosques de la parte septentrional y central de la provincia, Casas de Palomero (Hurdes), sierra de Gata, Serradilla, etc. Fl. Abril, Junio. Famitia Apocinaceas. Nerium Oleander L.=Adelfa, Baladre, Rosas de vio.—Crece en la orilla de los arroyos y rios; Valle de Plasencia, sierra de Gata y rios Tajo, Almonte y Salor. Fl. Agosto. Vinca minor L.—=Hierba doncella, Pervinca.—Crece en los montes de la cordillera central de San Pablo, Valle de Plasen- cia, Jerte, Garganta de Banos, Jarandilla. Fl. Marzo, Julio. V. media Link. et Hoffm.—V. major Brot.—=V. acutifiora Bertol. = Hierba doncella—Se encuentra en los montes de la sierra de San Vicente, Guadalupe, Piornal. Fl. Marzo, Julio. FaminiA Asclepiadaceas. Perviploca levigata Ait.—En los montes de la sierra Marchon y Guadalupe. Fl. Julio. Cynanchum acutwn \..—Crece en los sotos del Chinchén, Chi- quero, Berbegones y cordillera central de San Pablo. Fl. Julio. Vineetoxicum officinale Mceench.—Cynanchum Vincetoxzicum 1. (149) Rivas Mateos.—FrLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 229 Se encuentra bastante escaso en la sierra de Gredos y montes de la parte alta de Guadalupe y Yuste. V. nigrum Moench. Asclepias mgra L.=Cynanchum nigrum Rcem.—Comun en la sierra de Gata, Gredos, Valle de Plasen- cia, cordillera central de San Pablo. etc. Fl. Abril, Julio. ORDEN SOLANIDAS. FamitiA Convolvulaceas. Convoloulus Cantabrica L.—C. terrestris L. b. ¢. 224.=C. va- lentinus Cav.—Crece en los campos de la Bazagona y en la cordillera central de San Pablo, segun el Sr. Rivas y Santos. Fl. Julio. C. lanuginosum Desr.—=C. capitatus Cav.=C. linearis DC.— Habita en los mismos sitios que la especie anterior, Campos de Coria y Casar de Caceres. Fl. Junio, Julio. C. liniatus L.—Crece en los campos de Caceres, Calerizo y Minas de Fosfato. Florece en Mayo. C. undulatus Cav.—Especie muy comun en los terrenos es- teparicos de Trujillo, Logrosan, Caceres. Fl. Mayo. C. arvensis L.=Corregiiela, Hnredaderas.—Muy comin en las vias férreas y sembrados de todas las partes de la provincia. Fl. Abril, Septiembre. C. Altheoides L..—Nosotros hemos encontrado esta especie en el soto del Lance de la Mora é Isla de Plasencia. El Sr. Fer- nandez Lancho nos ha entregado ejemplares procedentes de las callejas de Casas de Millan. Fl. Abril, Mayo. Calystegia Sepiwm R. Br.—Comunisima en los bosquetes y sotos de toda la provincia. Fl. Julio, Agosto. FAMILIA Cuscutaceas. Cuscuta minor DC.—Crece sobre la lentisca, cantueso, brezo y otras diversas plantas; Serradilla, Plasencia, sierra de Gredos y cordillera central de San Pablo. Fl. Junio, Agosto. C. Buropea L.=C. major Bauh, et DC.—Sobre los cantuesos, brezos, Oxiris alba, etc.; Plasencia. Fl. Junio, Agosto. C. epilinum Whei.= FL. densiflora Soy.—Vive sobre el /ino y haba; Serradilla y Casas de Millan. Fl. Mayo. 230 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (150) Famintia Borragineas. Cerinthe minor L.—-Indicada por Quer y Palau en Candelera; nosotros no hemos podido hacer la comprobacion. Rochelia stellulata Rehb.—WMesserchsmidia cancellata Asso.— Crece en los campos de Hervas, carretera de Salamanca (Ven- ta de la Vina). Fl. Octubre, Noviembre. Borrago officinalis L.==Borraja, Argamula.— Comin en toda la provincia. Las flores se usan como cordiales. Fl. Abril, Mayo. Symphylum tuberosum L.—Crece, aunque muy escasa, en la cordillera central de San Pablo (Casas de Millan, Serradilla). Fl. Abril, Mayo. S. officinale L.—Habita en la sierra de Gata, Deleitosa y Gre- dos (Madrigal, Hermanitas). Fl. Mayo, Agosto. Anchusa undulata L.= Buglossum angustifolium A\\.—En los terraplenes de la via férrea portuguesa, Malpartida, Canave- ral y Navalmoral de la Mata. FI. Abril. A. Italica Retz.—Chupamieles, Arguimula, Argamula, An- cusa.—Muy comun en toda la provincia. Fl. Abril, Mayo. La flor la usan como cordial. A. sempervirens L.—Especie escasa en la provincia. Sdlo la hemos recogido en el valle de Plasencia, Hervas y Garganta de Béjar. Fl. Junio. A. Granatensis Boiss.—Especie comin en el valle del Tietar, Barrao, Bazagona y Valle de Plasencia. Fl. Julio. Lycopsis arvensis L.—Comun en los campos de Plasencia y vallecitos de la cordillera central de. San Pablo. Fl. Abril, Junio. Nonnea micrantha Boiss. et Reut.—Crece en los sitios este- paricos de los alrededores de Arroyo del Puerco y Minas de Caceres. Fl. Abril. NV. alba DC.—Muy comin en los alrededores de Serradilla, Bazagona y Plasencia. Fl. Mayo, Junio. NV. nigricans DC.—Comiun en los campos de Caceres, Truji- llo y Arroyo del Puerco. Fl. Mayo. Alkanna tinctoria Tausch.—Aunchusa tinctoria Dest.=Planta de tintes.—¥En los sembrados y campos roturados de Serradi- lla, Plasencia y Casas de Millan. Fl. Mayo, Junio. (151) Rivas Mateos.—FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 231 Onosma echioides L.=Cerinthe echioides Scop.— Muy comin en los campos de Caceres y Logrosan. Fl. Junio. Lithospermum fruticosum L.—=Hierba de las siete sangrias.— Crece en los terrenos esteparicos de Caceres, Trujillo, Arroyo del Puerco y Casar. Fl. Abril, Junio.—Usa esta especie el vulgo para disminuir la sangre. L. prostratum Lois.—Se encuentra en los mismos sitios que la anterior especie y en la cordillera central de San Pablo, se- gun el Sr. Rivas y Santos. Fl. Abril, Junio.—Tiene los mismos usos que el LZ. fruticosum L. L. purpureo-ceruleum L.=L. violaceum Lamk.—Habita en los terrenos roturados de Gredos. Fl. Abril, Julio. L. officinale L.—Comiun en los bosques de la Bazagona y Hervas. Fl. Mayo, Julio. L. apulum. Vahl.—Muy comin en los cerros de Plasencia, Serradilla y Caceres. Fl. Abril, Julio. L. arvense L.=Marujo, Pimpinela.—Crece abundantisimo en los terrenos cultivados de toda la provincia. Fl. Abril. Echium polycaulon Boiss.—En las inmediaciones de Torna- vacas y Cabezuela (Pav. herb. ex Boiss.)? E. Fontanesii DC.— Esta es muy comun en Cabezuela, Tor- navacas, Jerte y sierra de Gredos. Fl. Mayo, Agosto. E. vulgare L..=Chupamieles, Viborera, Planta de la tinta.— Muy comin en toda la provincia. Fl. Abril, Junio. BE. pustulatum Sibth.—En los mismos sitios que la anterior, pero menos frecuente. Fl. Abril, Junio. E. Lusitanicum Brot.—Es frecuente en el valle del Helecho, Serradilla y Mirabel. Fl. Marzo, Abril. BE. Italicum L.=F. Pyrenaicum Desf.—En el Valle de Pla- sencia y en los alrededores de Jarandilla y Jerte. Fl. Agosto. E. Gaditanum Boiss.—Campos limitrofes 4 Plasencia, Virgen del Puerto, Serradilla. Fl. Mayo. BE. plantaginewm L.—Comiun en toda la provincia, abundando en la parte septentrional y central. Fl. Abril, Junio. Pulmonaria tuberosa Schr.—Crece bastante escasa en los campos de la Bazagona y dehesa de Mirabel. Fl. Mayo. Myosotis palustris With. —Muy comin en Caceres, Truji- llo, etc. Fl. Mayo. M. lingulata Lchm.—En el Valle de Plasencia, Navaconcejo y Jerte. Fl. Junio, Agosto. 232 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (152) M. stricta Link.— Muy comun en las vegas del Tietar y Jer- te, Bazagona. Fl. Agosto. M. versicolor Pers.—Frecuente en los campos préximos a Coria, Serradilla, Valle de Plasencia. Fl. Junio. M. lutea Pers.—Comiun en toda la parte septentrional de la provincia, valle del Helecho, Plasencia, sierras de Gredos y Gata. Fl. Mayo, Agosto. M. intermedia Link.—En los alrededores de Serrején, Pla- sencia. Fl. Junio. Cynoglossum officinale L.—Crece en los alrededores de la mayor parte de los pueblos de la provincia. Fl. Abril, Mayo. C. pictum Ait.—Crece en los mismos sitios que las especies anteriores. Fl. Abril, Mayo. C. Cheirifolium L.= Lengua Hee: —Iin toda la provincia. Fl. Abril, Mayo. Omphalodes linifolia Mcench. —Comuin en la sierra de Gata y Plasencia. Fl. Abril. Asperugo procumbens L.== Raspajones.—Muy comin en las regaderas y sembrados de toda la provincia. Fl. Abril. Heliotropium supinum L.—Especie nruy comun en los cam- pos de Serradilla, Caceres, Plasencia, Trujillo, etc. Fl. Junio, Septiembre. H. Europeum L.—Tan comin como la especie anterior. Flo- rece en Abril y Mayo a Octubre. FAMILIA Solanaceas. Solanum Dulcamara L.=Dulcamara, Moraletas zarzaleras.— Especie muy comtin en los arroyos, sitios sombrios y sotos de toda la provincia, lo mismo central que occidental. Fl. Junio, Octubre.—Sin aplicacién vulgar conocida. \ S. nigrum L.== Hierba mora, Negrejas.—Muy comun en las malezas y olivares de toda la provincia. Fl. Junio, Noviembre. S. villosum Lamk.—=Hierba mora.—Se encuentra en los mis- mos sitios que la anterior. Fl Junio, Noviembre. Physalis Alkehengi U.=Vejiga de pervo.—Crece en los mon- tes de la cordillera central de San Pablo, arroyos de la sierra del Villar, Valle de Plasencia. Fl. Abril, Junio. Alropa Belladona L.= Belladona.—sS8olo hemos visto alguno (153) Rivas Mateos.—FrLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 233 que otro ejemplar junto 4 las tapias del Hospicio de Caceres y junto 4 la muralla de Galisteo. Fl. Mayo. Mandragora vernalis DC.= Bolenchuelas, Mandragora.—Cre- ce en los montes de San Pedro y Montanchez. Fl. Marzo. M. autumnalis Spr.—M. microcarpa Bertol.—El Sr. Rivas y Santos dice haber visto esta especie en la Cruz del Cancho y portilla de la Garganta (Serradilla). Fl. Octubre. Lycium barbarum U.==Cambronera.— Nosotros hemos podido observar algunos ejemplares espontaneos en el valle del Tie- tar y muy proximo a Gredos. Fl. Abril, Julio. L. Europeum U.=Cambronera.—F recuente en los montes de la Jibe, cordillera central de San Pablo, Caceres, Plasencia, Serradilla, etc. Fl. Abril, Junio. L. afrum L.—Crece, aunque bastante escasa, en las inme- diaciones 4 Casas de Millan y junto al bosquete de pinos. Flo- rece en Noviembre. Datura Stramonium L.= Estramonio, Ruesnos (a las semi- llas).—Con preferencia en las cuencas de los rios. Nosotros he- mos visto esta especie en el Tajo, Monte, Tietar, Salor, Alagon y Jerte; campos de Serradilla, Caceres, Plasencia, Casas de Millan, Hervas, Coria, Cafaveral, Trujillo, Bazagona y Mira- bel. Fl. Julio, Septiembre.—Las hojas se usan en infusion como calmante. D. tatula L.= Estramonio.—Se encuentra en los mismos sitios que la especie anterior. Fl. Julio, Septiembre.—Es de igual uso. D. fervor L.—Sdlo hemos visto esta especie en las vegas del Tajo y junto a la portilla del Tajo en la sierra de Zapata. Flo- rece en Julio, Septiembre. Hyosciamus albus U.— Beleio, Chupamieles.— Muy comin en toda la provincia, encontrandose con especialidad en los alre- dedores de los pueblos. Fl. Mayo, Agosto.—La infusion hecha con las hojas la aplican como calmante. H. niger \..=Beleio, Chupamieles.—Se encuentra en los mis- mos sitios que la especie anterior. Fl. Mayo, Agosto.—De igua- les usos. 234 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (154) FAMILIA Verbascaceas. Verbascum Thapsus L.==Gordolobo.—Muy comin en toda la provincia, lo mismo en la regién occidental que en la central. Fl. Julio. V. phlomoides ..—Kn los mismos puntos que la anterior, pero bastante escasa; Plasencia, Caceres. Fl. Julio. V. virgatum With.—En los prados de Plasencia, Hervas y valle del Tietar (Bazagona). Fl. Junio, Agosto. V. Blattaria L.—Crece con mucha frecuencia en los alrede- dores de Serradilla y Galisteo. Fl. Agosto, Septiembre. V. sinuatum .==Gordolobo rizado.— Muy comin en los pra- dos y montes de Plasencia, Serradilla, Caceres y en toda la cordillera central de San Pablo. Fl. Mayo, Julio. V. pulverulentum Vill. Gordolobo blanco.—Especie bastante comun en los alrededores de Plasencia y Caceres. Fl. Julio. V. Lychinitis L.==Gordolobo.—Muy comin en los campos de Serradilla y Bazagona. Fl. Junio. V. Henseleri Boiss.—Es una especie bastante frecuente en la parte alta del Valle de Plasencia, sierras de Dios Padre, Gredos y cordillera central de San Pablo. Fl. Abril, Mayo. Celsia Barnadesii G. Don.—Crece en los barrancos de Pla- sencia y cercados de la Romana (Serradilla). Fl. Mayo, Junio. ORDEN ESCROFULARIDAS. FAMILIA Escrofulariaceas. Scrophularia peregrina L.—¥En las inmediaciones de Jarai- cejo, Aldea del Obispo y Retamosa. Fl. Abril, Mayo. Sc. Herminii Link.— Nosotros hemos encontrado esta espe- cie, aunque muy escasa, en el Valle de Plasencia y sierra de Gredos. Fl. Julio. Sc. Scorodonia ..—Habita en la sierra de Dios Padre y en las Hermanitas de Gredos. De lo alto de la cordillera central de San Pablo poseemos ejemplares recogidos por el Sr. Rivas y Santos. Fl. Abril, Julio. Sc. nodosa L..— Es bastante comin en las inmediaciones de Plasencia, Valle de Plasencia y Aldeacentenera. Fl. Mayo. (155) Rivas Mateos.—FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 285 Sc. alpestvis J. Gay.—Se encuentra bastante escasa en los vallecitos de la sierra de Gredos (Madrigal). Fl. Agosto. Sc. auriculata L.—KEs bastante frecuente en las inmediacio- nes de Serradilla, Caceres y Plasencia. Fl. Junio. Se. canina L.=Se. mulltifida Lamk.=J/aramagos.— Muy co- mun en los alrededores de Coria, Casillas, Riolobo, Serradilla. Caceres, Trujillo, Plasencia, etc. Fl. Abril, Mayo. Sc. aquatica L.—Muy comin en los arroyos y parajes hume- dos de toda la provincia. Fl. Julio, Agosto. Antirrhinum Orontium L.—Especie muy comun en los sem- brados y huertas de Serradilla, Casas de Millan, Caceres, Pla- sencia, etc. Fl. Abril, Mayo. A. majus L.= Boca de Dragon.—Especie muy frecuente en la provincia; sierra de Gredos y cordillera central de San Pa- blo. Fl. Junio, Julio. A. Hispanicum Chav. Boca de Dragon.—Crece en la cordi- llera central de San Pablo, Virgen de la Montana en Caceres. Fl. Mayo, Junio. A. glutinosum Boiss. et Reut.— De esta especie, que es bas- tante escasa, poseemos ejemplares recogidos por el Sr. Ri- vas y Santos en la cordillera central de San Pablo. Floreco en Junio. A. Asarina L..—Hemos encontrado esta especie en el alto de Madrigal (Gredos); del Valle de Plasencia nos han remitido algunos ejemplares que, aunque en muy mal estado, parecen ser de esta especie. Fl. Agosto. Anarrhinum bellidifolium Desf. Platanera de la Sierra.— Muy comun en toda la cordillera central de San Pablo, alrede- dores de Plasencia, subida 4 la Virgen de la Montana de Cace- res. Fl. Abril, Agosto. A. duriminum Brot.—Comiun en los alrededores de Serradi- lla. Fl. Julio. Linaria Cymbalaria Mill. —Bastante comin en los campos de Plasencia, huertas de Serradilla. Fl. Abril. L. Elatine Desf.—Se encuentra en los mismos sitios que la anterior. Fl. Junio. L. spuria Mill.—Se encuentra en el Valle de Plasencia y junto a Tornavacas; menos frecuente en el valle Helechal de la cordillera central de San Pablo. Fl. Agosto. L. lanigera Desf.=A brojo loco.—Muy frecuente en las inme- 236 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (156) diaciones de Caceres, cuencas del rio Tajo (acena de los Pere- grinos). Fl. Agosto, Octubre. ‘ L. triphylla Mill.—Muy comin en las huertas de Caceres, arenales del Tietar (Bazagona), Lance de la Mora (Tajo). Flo- rece en Marzo, Junio. L. hirta Mench.—Canarios trigales.—Es bastante comin en los sembrados de cereales, Valle de Plasencia y praderas de Serradilla. Fl. Abril, Mayo. L. nived Boiss. Borreguillos palomeros, Planta de la Virgen. Nombres vulgares con que los del pais distinguen a esta her- mosa especie de la regién central, sierra de Dios Padre, alto del puerto de Madrigal, Orinal de la Virgen. Fl. Junio, Agosto. L. delphinioides Gay.—Es otra hermosa especie de la regién central, Valle de Plasencia, sierra de Gredos, cordillera cen- tral de San Pablo (sierra de Zapata y Arenal Gordo). Fl. Abril, Junio. L. spartea Link et Hoffm.—= Pajaritas chilines.—Muy comin en las sierras de Serradilla y Zapata, campos de Caceres y Pla- sencia, cuencas del Tajo. Fl. Abril, Julio. L. Pelisseriana DC.—El Sr. Rivas y Santos dice haberla visto en los alrededores de la Cruz del Cancho (Serradilla). Fl. Abril, Mayo. L. amethystina Desf.—Se encuentra en las praderas y cerros de Plasencia, cordillera central de San Pablo y Virgen de la Montana (Caceres). Fl. Abril. L. Tournefortii Willk.— Muy comun en la cordillera central de San Pablo, Caceres, Plasencia, Trujillo. Fl. Agosto. L. arvensis Desf.—Comiun en las huertas de Serradilla, Coria, Guadalupe, etc. Fl. Abril, Mayo. L. simplex DC.—Comun en los sembrados de la mayor parte de la provincia. Fl. Abril, Mayo. L. micrantha Spr.=A. parviforum Wild.—Esta especie y la anterior son consideradas por muchos botanicos como varie- dades de la Z. arvensis; se encuentra en los mismos sitios, siendo mas abundante. Fl. Abril, Mayo. ( L. Alpina DC.—Comun en toda la sierra de Dios Padre y Gre- dos. Fl. Agosto. L. supina Dest.—Se eacuentra en los mismos sitios que la anterior. Fl. Mayo, Julio. (57) Rivas Mateos.—FrLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 237 L. cesia Lag.—Frecuente en los alrededores de Plasencia, San Anton, Virgen del Puerto, Valle de Plasencia. Fl. Mayo. L. melanantha Boiss. et Reut.—Crece en la sierra de Gredos, Valle de Plasencia, alrededores del castillo de Monfragiie y sierras de la cordillera Oretana. Fl. Abril, Junio. L. triornithophora Wild.—En los prados y cerros de Garro- villas, cuestas del Tajo. Fl. Agosto. L. minor Desf.—Crece en el cerro del Tridngulo (Caceres). Fl. Julio. L. origanifolia DC.—Comun en las vegas del Tietar (Baza- gona, Chiquero, Portilla). Fl. Mayo, Julio. L. villosa DC.—Hemos visto esta especie en ciertos parajes humedos de la regién central: bajada del puerto Castanos, Garganta y Agua Negra (Serradilla), arroyos del Valle de Pla- sencia, proximo a Tornavacas y Jerte. Fl. Mayo, Septiembre. Gratiola oficinalis L.—Planta de 3 a4 dm. con raiz rastrera, poco dividida y de matiz rojizo. Tallo erguido, fistuloso y muy marcadamente tetragono, con las aristas algo salientes. Hojas opuestas, sentadas, abrazadoras, lanceoladas, de unos 5 cm. de longitud por465 mm. de ancho, completamente lampinas, 6 cuanto mas las del centro, con una ligerisima pubescencia en la base y por el haz; nunca son agudas, notandose que las inferiores son un poco mas romas y obtusas que las superio- res; son trinervias y dentadas sélo en la mitad superior; los dientes, débilmente mucronados, estan en trechos de 5en 5mm.; los nervios, en numero de tres, rara vez cinco, aparecen indi- visos, 6 a lo mas los laterales dan casi imperceptibles nervie- citos que van a parar al vertice del diente; las flores, que son axilares y solitarias de un ascendente pedtinculo igual en lon- gvitud a la corola, y lleva en su parte superior dos 6 tres brac teitas dos veces mas largas y anchas que las lacinias del caliz; el caliz, formado por cinco lacinias que llevan en la parte in- terior y junto al nervio medio una 6 dos series de casi imper- ceptibles pelitos mates é indivisos, que decrecen en numero a medida que se acercan al vértice de la lacinia; la corola irre- gvular, tubulosa 6 ligeramente tetragona y barbada en el inte- rior, consta de cuatro ldbulos dispuestos en dos labios, de los cuales el superior es bifido, mientras que el inferior aparece con tres ldbulos iguales; el matiz de la corola es blanco rosa- ceo, con los nerviecitos muy marcadamente rojos, sobre todo 238 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (158) en la base; los estambres, en numero de cuatro, de los cuales dos son estériles y poco desarrollados, constan de un filamento corto y una antera redondeada, bilocular; el ovario esta com- puesto de dos carpelos cerrados y multiovulados. Fruto en caja aovado-cénica, compuesta de dos valvas que terminan en pun- ta rigida, debido 4 que el nervio medio de cada carpelo es fuerte y prominente en el apice; las semillas, que son peque- nisimas, alveoladas y rugosas, presentan un color leonado.— Es bastante comtin en sitios frescos y sombrios: Valle de Pla- sencia, Hervas, arroyo Barbaén y Gamera de Serradilla, Cace- res, Lance de la Mora (Tajo). Fl. Agosto, Septiembre. G. linifolia Brot. (1).=G@. linifolia Vahl.=G@. crassifolia et salmantica Lag.— Planta de 1 6 2 dm. con raiz casi indivisa y de un tinte algo rojizo. Tallo fistuloso semi-rastrevo, cua- drangular y con pelos carnosos, brillantes y cristalinos. Ho- jas crasas, sentadas, abrazadoras, aovado-lanceoladas, obtu- sas, generalmente trinervias 6 por rarisima excepcidn uniner- vias, repletas por ambas caras de pelos carnosos, cortos é in- divisos; los bordes aparecen: en las hojas inferiores enfevo; en las superiores ligerisimamente dentado. Las flores son axilares y solitarias y constan de un pedtnculo vez y media mas largo que la corola, pubescente, cilindrico en la parte inferior, en- sanchado y tetragono en la superior; bracteas de igual longi- dud que las lacinias calicinales; caliz compuesto de cinco laci- nias pubescentes en ambas caras; corola irregular tubulosa, barbada, compuesta de cuatro ldbulos, de los cuales el supe- rior es escotado, los restantes iguales; el matiz de la corola es rojo-violaceo; estambres dos por aborto constante de otros dos que suelen hallarse rudimentarios 6 nulos; filamento corto y antera alargada y bilocular; ovario bi-carpelar multiovulado. Fruto caja, redondeado, bivalvo y plurispermo; semillas alveo- ladas, rugosas y blanquecinas. Fl. Agosto, Septiembre.—Ha- bita en los parajes humedos y sombrios: Valle de Plasencia, Jerte, Tornavacas, sierras de Gredos y Gata, Aldeanueva del (1) El nombre @. crassifolia es mas apropiado que el de @. linifolia Brot., segan demostrabamos en un trabajo publicado en las Actas de la Soc. ESP. DE HIST. NAT. Sélo adoptamos el dado por Brotero por seguir la ley de la nomenclatura botdnica: «el nombre de autor mds antiguo es el preferido.» (159) Rivas Mateos.—FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 239 Camino, subida a la Virgen del Puerto (Plasencia), Caceres, arroyos de Barbaén, Garganta, Madronillo y Gamera (Serra- dilla). Veronica hederefolia L.=Violetillas trigueras.—Es una espe- cie bastante frecuente en los terrenos cultivados y htiimedos de toda la provincia, lo mismo en la regién central que en la occidental. Fl. Marzo, Abril. V. cymbalaria Bod.—Tan frecuente 6 mas que la anterior, floreciendo y encontrandose en los mismos sitios. V. agrestis L.—En los mismos sitios que las especies ante- riores. Fl. Abril. V. Persica Poir.—Sdlo hemos podido observar esta especie en los muros viejos de lo alto de la Virgen de la Montana. Flo- rece en Abril, Julio. V. triphyllos L.i—Muy frecuente en los arenales del Tajo, huertas de Santa Catalina y Hoyo (Serradilla), riachuelo Guai- loba (Caceres). Fl. Abril. V. verna L.—Crece en los alrededores de Mirabel, Casar de Caceres, Aliseda, Valle de Plasencia. Fl. Abril. V. arvensis L.— Es muy comtn en los prados y terrenos hi- medos y cultivados. Fl. Marzo, Julio. V. serpyllifolia L.—Se encuentra en los campos proximos Hervas y en el Valle de Plasencia. Fl. Marzo, Agosto. V. Apennina Tausch.—Suele encontrarse, aunque muy esca- sa, en las regueras que descienden de lo alto de las sierras de Gredos y Gata. Fl. Agosto. V. Teucrium L.—Crece en los montes septentrionales, Gre- dos, Piornal, Tras la Sierra y cordillera central de San Pablo. Fl. Junio. V. oficinalis L.—Se encuentra bastante escasa en las prade- ras de la parte septentrional, Valle de Plasencia y campos pro- ximos a Hervas y Aldeanueva del Camino. Fl. Mayo, Julio. V. scutellata L.—Suele hallarse en las regueritas de la parte alta de Gredos y Tornavacas (nacimiento del Jerte). Fl. Mayo, Junio. V. Anagallis L.—Frecuente en los arroyos de Monroy, Tala- van; menos frecuente en la parte septentrional, Plasencia. Fl. todo el verano. V. Beccabunga L.—Se encuentra mas abundante que la an- terior en Serradilla, Plasencia, Caceres. Fl. Agosto. 240 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (160) Limosella aquatica L.—Comiin en los sitios himedos de Se- rradilla y Caceres. También es frecuente en la parte septen- trional, Jerte, Pasarén, Bazagona. FI. Julio. Lrinus Alpinus L.—Crece en lo alto de la sierra del Piornal. El Sr. Rivas y Santos la ha recogido en la cordillera central de San Pablo. FJ. Abril, Agosto. Digitalis purpurea L.=Digital, Dedales, Viluria, Guantes de la Virgen, Pasionaria, Tristera.— Esta importantisima especie se encuentra repartida por las montanas septentrionales y cen- trales, cuya altura no baja de los 400 m., subiendo hasta los 2.425 m. en el picacho de la sierra de Gredos. La hemos visto en toda la cordillera central de San Pablo, alto de la Virgen de la Montana y paseo alto de Caceres, sierra de Guadalupe, Marchon, Gata, Gredos, Piornal, Tras la Sierra, Deleitosa, Her- vas, Orinal de la Virgen y Lance de la Mora en Serradilla, sie- rra de la Jibe, Herreruela, Aliseda y Virgen del Puerto. Flo- rece de Abril a Julio.—Goza de una gran popularidad en las afecciones cardiacas aplicando sus hojas, bien en infusidn 6 mezclandolas con el tabaco para fumarlas. D. Thapsi L.—Los mismos nombres vulgares que la especie anterior. Crece muy comun en toda la provincia, acrecentan- dose mas en la cordillera central de San Pablo. Fl. Abril, Agosto.— Tiene los mismos visos que la D. purpurea, con la que la confunden. D. lutea L.=Digital amarilla.— Habita en la sierra de Gre- dos y baja, aunque muy escasa, hasta la de Guadalupe y parte alta de Montanchez y San Pedro. Fl. Junio. D. parviflora Jacq.—Sdlo hemos encontrado ejemplares de esta especie en los montes de la parte N. de la sierra de Gre- dos y muy proximo a4 las Hermanitas. Fl. Agosto. D. obscura L.—Comiun en los sitios pedregosos de la Cruz del Cancho, alrededores del castillo de Monfragitie, picachos de la portilla del rio Tajo. Fl. Mayo, Junio. Euphrasia officinalis L.—¥n los valles de la sierra de Gre- dos, Valle de Plasencia, sierra de Guadalupe. Florece en Abril, Agosto. Odontites longifora Webb.—Comun en los campos limitrofes i Aldeacentenera, Retamosa, Jaraicejo, Caceres y otros pun- tos. Fl., Mayo, Julio. O. lutea Rehb.=Valeo.— specie muy frecuente en la cordi - (161) Rivas Mateos.—FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 24] Hera central de San Pablo, jarales de Serradilla, sierra de Gre- dos. Fl. Mayo, Agosto. 0. rubra Pers.—En los mismos sitios que la anterior. Florece en Mayo, Agosto. O. viscosa Rehb.— Muy comtin en los montes y praderas de toda la parte septentrional, Plasencia y Valle, Serradilla, Ba- zagona. Fl. Abril, Mayo. O. tenwifolia Don. Gen. —Crece en los campos proximos a Logrosan, La Cumbre, Montanchez. Fl. Julio. Trizago apula Stev.—Comun en los prados y olivares de la sierra de Zapata, Valle de Plasencia, alrededores de Caceres. Fl. Mayo, Junio. Eufragia viscosa Bth.—Muy comin en la parte septentrional de la provincia, valles de Plasencia y del Tietar, Barrao y otros puntos. Fl. Abril, Junio. EZ. latifolia Griseb.—Crece en los mismos sitios que la ante- rior. Fl. Abril, Junio. Rhinanthus major Ehrh.—Habita en las praderas de la cor- dillera central de San Pablo, Gredos. Fl. Abril, Mayo. R. minor Ehrh.—Se encuentra en los prados del Tietar, Va- He de Plasencia, cordillera central de San Pablo, Caceres. Flo- rece en Abril, Mayo. Pedicularis sylvatica U.=Dragoncillo menov.—Crece en los ptados y junto a los arroyos de la parte septentrional, Valle de Plasencia, Bazagona. Fl. Abril, Junio. P. comosa L.—Crece, aunque muy escasa, en la parte alta de la sierra de Gredos (Madrigal). Fl. Agosto. P. rostrata ..—Muy comun en la parte alta del Valle de Pla- sencia (nacimiento del Jerte, Tornavacas), sierras de Gata, Dios Padre y Gredos. Fl. Agosto. Melampyrum arvense L.— Especie muy comin en la parte septentrional y parte alta de la meridional, Banos de Bafios, Hervas, Plasencia, sierra de Guadalupe. FI. Julio. M. cristatum L.—Crece en las inmediaciones del caserio de la Bazagona y Valle de Plasencia y Gredos. Fl. Julio. M. pratense L.—Es comtin en la sierra de Montanchez, San Pedro y Serradilla. Fl. Julio. ANALES DE HIST. NAT.— XXVIII. 16 242 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (162) FamitiA Acantaceas. Acanthus mollis L.—Crece en los parajes himedos y som- brios de Caceres, arroyo de las huertas, junto al antiguo hos- pital. También la hemos visto junto 4 la Garganta de Serra- dilla. Fl. Julio. Famitia Labiadas. Lavandula Stechas .==Cantueso, Tomillo.—Especie muy co- mun en toda la parte céntrica y meridional de la provincia, Canaveral, Serradilla hasta Plasencia, Caceres, Trujillo, ete. En la parte septentrional es escasa, desapareciendo cuando la altitud sube de 1.000 m. Fl. Mayo, Junio. L. pedunculata Cav.—Cantueso largo, Tomillo..—K\ area de esta especie es en un todo igual a la anterior, notandose tiende a predominar en las llanuras. Il. Mayo. L. vera DC.=Espliego, Olor de iglesia, Perfume de Dios.—Co- mun en los sitios 4ridos de Trujillo, Torrejon, Jaraicejo, Mon- roy, etc. Fl. Mayo, Junio.— Todas las anteriores especies tie- nen uso vulgar como sahumerio. Mentha sylvestris l.==Mentla de agua, Mastranzo oloroso.— Kspecie muy polimorfa, razon por la cual ha sido objeto de caprichosas formaciones de variedades. De las ocho formas que tenemos a la vista creemos puedan referirse Wnica y ex- clusivamente 4 la var. zemorosa Bth. y la evispa Bth., Unicas que racionalmente pueden admitirse. Comin en los arroyos y sitios htiimedos, huertas, prados, etc. Fl. Junio, Agosto. M. rotundifolia L.= Mastranzo.— specie muy comin en los arroyos pedreros, prados y parajes encharcados. Fl. Junio, Julio. M. aquatica L.==Planta sandalera.— Comun en los arroyos y demas sitios frescos de toda la provincia. Fl. Julio. M. arvensis L.—Tan comin 6 mas que las especies anterio- res, prados y regaderas de Serradilla, Plasencia, Bazagona, Caceres, etc. Fl. Julio. M. Pulegium L..==Poleo.—XI\ poleo parece busca las praderas centrales y meridionales; es escasa en las septentrionales. Se- rradilla, Caceres, Plasencia, etc. Fl. Agosto. (163) Rivas Mateos.—LORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 243 Preslia cervina Fresen.—=Mentha cervina L.= Presta de v/o, Presta de ciervo. — Especie bastante frecuente en los sitios pedregosos y escarpados del rio Tajo, Berbegones, Orinal de la Virgen y Lance de la Mora, desembocadura del Tietar, alto de la Portilla de la Garganta (Serradilla). Florece en Ju- lio, Agosto. Lycopus Buropeus L.—Bastante comun en los parajes en- charcados, Caceres, Serradilla. Fl. Agosto. Origanum vulgare L.=Orégano.— Muy frecuente en los arro- yos y montes de toda la parte céntrica, Canaveral, Torrejon, Jaraicejo, Monroy, Garrovillas. Fl. Junio. QO. virens Hott. et Link.—Orégano.—En los mismos sitios que la especie anterior, sierra de Gredos. Fl. Agosto. O. Majorana L.= Mejorana.—Hemos podido encontrar unos escasos ejemplares, que desde luego son subespontaneos, en el ribero del Tajo y muy proximo al puente del Cardenal. Flo- rece en Julio. Thymus Mastichina U.=Cantuesillo, Mejorana.—Comitn en los montes de la sierra de Guadalupe, Portilla del rio Tietar y otros sitios. Fl. Agosto. T. Zygis \..=Tomillo salsero 6 sansero.—Vspecie muy comin en los arenales del Tajo, barcas de Alconeta, riberos de la Her- guijuela de Guadalerma (Casas de Millan), sierra del Villar. F). Agosto. T. vulgaris L.==Tomillo, Tomillo menor.—'s muy frecuente en los terrenos aridos, Las Minas de Caceres, Arroyo del Puer- co, Casar de Caceres, en ciertos sitios de la cordillera central de San Pablo (Puerto de Casas de Millan), en los alrededores de Trujillo y Logrosan. Fl. Abril, Julio. T. Chamedrys ¥ries.— Especie bastante frecuente en la sie- rra de Zapata, Cruz del Cancho; en la mayor parte de las sie- rras septentrionales, Gredos, Gata, Piornal y Hervas. Florece en Mayo, Agosto. T. Serpyllum L.—Muy comitn en los campos esteparicos con- tiguos a Caceres, Minas y Arroyo del Puerco; menos frecuente en la parte septentrional. Fl. Julio, Agosto. T. bracteatus Lge.—Ksta especie, que fué una de las indica- das como propia del Guadarrama, la hemos podido observar, no ya sdlo en la sierra de Gredos (Madrigal, Hermanitas) y demas septentrionales (Tras la Sierra y Piornal), sino también 2h ANALES DE HISTORIA NATURAL, (164) en la de San Pedro y parte alta de la de Montanchez. Florece en Julio, Agosto. Hyssopus officinalis L.=Hisopo.—Habita en la parte monta- na de Ja jurisdiccién de Serradilla, cuencas del rio Salor, parte alta del Valle de Plasencia hasta la sierra de Gredos. Fl. Julio, Agosto. —I] vulgo la usa en infusién teiforme como estomacal. Satureja montana L.—WLa var. prostrata Boiss. se encuentra en Gredos (Madrigal), y la forma ¢/pica en toda la sierra de Serradilla y Zapata. Fl. Agosto, Septiembre. S. horleusis L.=Tomillo real.—¥Es una especie muy rara como espontanea; no obstante, la hemos visto en la sierra de Tejadilla y alto del puerto de Miravete. Fl. Julio, Agosto. Calamintha Nepeta Hoffm.=—= Toronjil.— Muy comun junto a las paredes de los cercados, sitios himedos y sombrios de Se- rradilla, Bazagena, Plasencia, Caceres, etc. Fl. Agosto, Octu- bre.— La infusién teiforme hecha con la sumidad florida goza entre el vuleo como medio eficacisimo para combatir el asma. C. officinalis Mench.= Toronjil.— Habita en los prados y montes de la regién central, Garrovillas, Plasencia, Hoyos, etc. KF]. Abril, Septiembre.— Tiene los mismos usos que la especie. anterior. C. menthefolia Hort. Toronjil nevadillo.—Especie muy vul- ear en toda la provincia. FI. todo el ano. C. Acinos Bth.— Habita en los parajes himedos del Valle de Plasencia y Bazagona; escasa en la sierra de San Pedro y Se- rradilla. F!. Abril, Agosto. C. graveolens Bth.—Comiun en los campos limitrofes a Cace- ceres (Paseo Alto, San Blas, Puente Nuevo), Serradilla y Valle de Plasencia. Fl. Junio, Julio. C. volundifolia Willk.—Es también bastante frecuente en los parajes himedos de casi toda la provincia, Valle de Pla- sencia, Serradilla, Caceres. Fl. Junio. C. Alpina Bth.—Es muy frecuente en toda la provincia, siendo abundantisima en el Valle de Plasencia y sierra de Gredos. Fl. Mayo, Agosto. C. Clinopodium Bth.—Especie bastante comun en la sierra de Zapata, alrededores de Plasencia y Caceres. Fl. Julio, Agosto. Melissa (ficinalis L.=Melisa, Toronjil de huerta.—¥Especie frecuentemente cultivada en los jardines y huertas por su delicado aroma. Crece espontanea en la sierra de Serradilla a (163) Rivas Mateos.—FrLORA DE LA PROVINCIA DE CACHERES. 2 (Puerto Castano). Fl. Junio.—La sumidad florida en infusién se emplea como excelente carminativo. Rosmarinus officinalis L..=Romero.— Ks una especie bastante comin en la parte central vy meridional de la provincia (La Jara, Caceres, Trujillo, San Pedro, Montanchez y Guadalupe); decrece en la septentrional y desaparece a una altitud de 1.500 metros. Fl. todo el ano. Salvia officinalis L.==Salvia.—Especie bastante frecuente en los montes de la cordillera central de San Pablo, cuencas del Tajo, sierra de Miravete y Virgen de la Montana en Caceres. Fl. Abril, Mayo.—El vulgo hace infusiones con las hojas y las usa para combatir la anemia y enfermedades del estémago. S. Javandulefolia Vahl.—Salvia angosta.—Mas frecuente que la especie anterior en los Campos proximos a Caceres, sierra de San Pedro, Guadalupe y Montanchez, Serradilla, Plasen- Cla x#CtCe Pid ULLO: S. verticillata L.—Especie bastante escasa; sdlo hemos po- dido verla en la sierra del Barrao y muy proximo 4 Tejeda; el Sr. Rivas y Santos dice haberla recogido en las inmediaciones de la Cruz del Cancho (Serradilla). Fl. Mayo, Julio. S. Sclarea L.A maro.— Habita en las inmediaciones de Se- rradilla (Garganta) y en la Isla de Plasencia. Fl. Junio. S. dthiopis L.—Especie muy comin en las riberas del Tajo, montes de la sierra de Montanchez, Virgen de la Montana en Caceres, Isla y Virgen del Puerto en Plasencia, Serradilla. Fl. Julio, Agosto. S. argentea L.—Muy frecuente en los sembrados y praderas de la mayor parte de la provincia, Serradilla, Valle de Plasen- cia, Caceres. Fl. Abril. S. inamend Vahl.—Habita en las praderas de Guadalupe; mas rara en los campos de Trujillo. Fl. Julio. S Verbenaca L,=Salvera.— specie muy comun en las pra- deras y montes de toda la provincia; predomina en la parte septentrional, y va decreciendo 4 medida que se acerca a la region occidental. Fl. Marzo, Septiembre. Lizyphora Hispanica L.= Mastranco aromitico.— Se encuen- tra en la subida y junto al camino de la Virgen del Puerto (Plasencia), prados de los alrededores de Santa Catalina (Se- rradilla). Fl. Junio. Nepeta tuberosa L.—Es muy frecuente en los campos conti- 246 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (166) guos 4 Serradilla, dehesa de Marijudn, Plasencia, Casas de Marco, etc. Fl. Mayo, Julio. N. Cataria L.—Bastante frecuente en los montes de Hervas, Aldeanueva del Camino, Bayos y otros puntos septentrionales. Fl. Julio. NV. Nepetella Koch.—Lo mismo la var. « cordifolia que la & /anceolata Wk. son bastante comunes en los alrededores de Plasencia, sierra de Paredes y San Vicente. Fl. Julio. NV. Hispanica Boiss. et Reut.—Se encuentra bastante escasa en los cerros de Navalmoral de la Mata y Casatejada. Florece en Junio. Glechoma hederaceum L.—Hiedra terrestve.— Muy comin en los alrededores de los muros y sitios htimedos de toda la pro- vincia. Fl. Mayo, Julio.—El vulgo emplea la infusiédn hecha con las hojas como vermifugo. Lamium amplezcicaule L.==Rosetas de Cristo.—Vspecie muy frecuente en los parajes htiimedos; huertas y valles de Serra- dilla, Plasencia, Coria, Trujillo, etc. Fl. invierno y primavera. La var. a/biflora Laz. et Tub. sdlo la hemos recogido en los alrededores de Navalmoral de la Mata y olivares de Serradilla. Fl. Junio. L. incisum Wild.— En los campos de San Anton (Plasencia), praderas de Canaveral, La Cumbre. Fl. Abril, Mayo. L. purpureum L.=Casacas, Pajarillas, Pajavilla menov.— Es una planta muy comun en las huertas y sitios himedos de toda la provincia, Caceres, Plasencia, Trujillo, Jarandilla. Flo- rece en invierno y primavera. L. maculatum L.— En la parte septentrional de la provincia, sierras de Gredos, Guadalupe (meridional); muy escasa. Flo- rece en Junio. L. album L.—Sdlo hemos encontrado alguno que otro ejem— plar en el soto del Orinal de la Virgen y Lance de la Mora. Fl. Junio, Julio. L. Galeobdolon Crantz.—Habita en la sierra de Dios Padre, Gredos y Valle de Plasencia. Fl. Junio, Agosto. Galeopsis Ladanum L..— Las dos var. « latifolia y 3 angusti- Jolia son bastante frecuentes en la provincia. La primera en el Valle de Plasencia, Hervas y Virgen de la Montana de Cace- res. La segunda en las inmediaciones de Serradilla, Plasencia. Fl. Julio, Agosto. (67) Rivas Mateos.—FrLOoRA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 247 G. Carpetana Willk.—Especie muy comtn en la sierra de Gredos y Dios Padre, nula por completo en la parte meridio- nal y central. Fl. Agosto, Septiembre. G@. Tetrahit L.—Habita en la cordillera central de San Pablo, puerto de Casas de Millan, alrededores de Serradilla, Plasen- cia, Aldeanueva. Fl. Agosto. Stachys Germanica L..—1 Sr. Rivas y Santos la ha encon- trado en la Cruz del Cancho (Serradilla). Nosotros la hemos recogido en el Valle de Plasencia y Virgen de Tiebas (Casas de Millan). Fl. Junio, Agosto. St. heraclea All.—Suele encontrarse en los montes y prade- ras septentrionales, Valle de Plasencia, Gredos, cordillera cen- tral de San Pablo. Fl. Agosto. St. Alpina L.—Se encuentra, aunque muy escasa, en lo alto de la sierra de Gredos, y baja hasta los 1.850 m. (Tornavacas). Fl. Septiembre. St. palustris L.—Se encuentra en las vegas del Tietar (Baza- gona, Chiquero), en la portilla del Tajo de la cordillera central de San Pablo y Corchuelas. Fl. Julio. St. arvensis L.—Muy frecuente en las inmediaciones de Se- rradilla, Plasencia; decrece notablemente en la parte meridio- nal y region occidental. Fl. Abril, Junio. St. annua L.—Se encuentra en las inmediaciones de Cace- res, San Blas y Puente del Marco. FI. Julio. St. hirta L..—Crece en los campos limitrofes a Plasencia, Isla y Herguijuela de Leal.—Fl. Marzo a Septiembre. St. recta L.—Se encuentra en gran abundancia en toda la parte septentrional y central de la provincia, Plasencia, Serra- dilla. Fl. Julio. Betonica officinalis L..—Crece, aunque bastante escasa, en la parte septentrional, Gredos, Barrao, en todo el Valle de Pla- sencia, camino de Banos 4 Garganta. Fl. Junio. Phlomis Herba-venti L.— Crece en las dehesas de la Hergui- juela de Guadarrama y Chistes (Serradilla), campos proxi- mos a. Caceres, Virgen del Puerto en Plasencia. Fl. Mayo, Julio. Ph. purpurea L.—Comiun en los barrancos y praderas de la cordillera central de San Pablo, alrededores de Trujillo y Ca- ceres. Fl. Mayo, Julio. Ph. fruticosa L.— Es bastante comun en la sierra de Guada- 248 ANALES. DE HISTORIA NATURAL. (168) lupe, camino de Caceres 4 Malpartida, alrededores de Serradi- lla. Fi. Agosto. Ph. Lychnitis L..==Borreguitos, Salvia amarilla.—Planta muy comin en los barbechos y montes, tanto meridionales como centrales; muy escasa en la parte septentrional. Fl. Abril, Julio. Sideritis scordioides L.—Lo mismo la var. genuwina que la Cavanillesii Willk. son muy comunes en la cordillera central de San Pablo, Plasencia, Caceres, buscando con preferencia los matorrales y demas sitios montuosos. Fl. Junio. S. hirsuta L.—"sta polimorfa especie se halla repartida por la mayor parte de la provincia, notandose mas su predominio en los montes centrales, Serradilla, Villa Real de San Carlos. Fl. Junio, Agosto. S. spinosa Lamk.—El Sr. Rivas y Santos dice haber encon- trado esta especie en la dehesa boyal de Serradilla (tapias de la cerca Tacones); nosotros no hemos podido comprobarlo. Flo- rece en Abril, Mayo. S. incana L.—Comiin en la dehesa Casas de Marcos, Cerro de Santa Barbara y Virgen del Puerto (Plasencia), en las de Arenal Gordo (Villa Real de San Carlos). Fl. Junio. S. montana L.—Crece en los alrededores de Caceres, Mon- tanchez, Minas de fosfato, etc. Fl. Abril, Junio. S. romana L..—Comiin en la parte meridional y central, Ca- ceres, SerrejOn, Casas de Millan. Fl. Junio. Marrubium vulgare L.==Marrubio, Palomera mayor.—Muy comun en los alrededores y callejas de los pueblos. Fl. Mayo, Julio. M. supinum L..—Solo hemos visto esta especie en la Isla de Plasencia y muy proximo al puente. Fl. Junio. M. candidissimum ..—Crece en el cerro de Santa Barbara, Virgen del Puerto y vinedos (Plasencia), subida ala Virgen de la Montana de Caceres. Fl. Julio. M. Alysson L..—Habita en los campos proximos 4 Serradilla, cerca de la Malagona é Iglesia, Plasencia, Trujillo, etc. Flo- rece en Junio. Melittis melissophylium L..—'"sta hermosa especie se encuen- tra en los cerros de Tornavacas, sierra de Gredos, y desciende a la parte meridional, sierra de Guadalupe. Fl. Junio, Agosto. Scutellaria galeviculata L..—Crece en las margenes del arroyo (169) Rivas Mateos.—¥rLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 249 Barbaon y Losa (Serradilla); menos frecuente en los montes septentrionales (Dios Padre). Fl. Julio. Brunella grandiflora Moench. —Crece en el valle Helechal (Serradilla), praderas de Monroy, campos de Caceres, Valle de Plasencia. Fl. Abril, Mayo. B. alba Pall.—Especie muy comin en los prados, regaderas y huertas de toda la provincia, Serradilla, Caceres, Plasencia. Fl. Abril, Mayo. B. hyssopifolia Lamk.—Crece en las cercanias de Plasencia, Valle de Plasencia, Hervas. Fl. Junio. Cleonia Lusitanica L.==Prunella intermedia Rchb.—Crece en las praderas de Serradilla, Valle de Plasencia, sierra de Gre- dos, Bazagona y otros sitios. Fl. Junio, Julio. Prasium majus L.—Especie indicada en Extremadura por Gémez Ortega. Nosotros la hemos recogido en la Virgen de la Montana (Caceres) y en el Valle de Plasencia. Fl. Abril, Julio. Ajuga reptans L..—Crece en el Valle de Plasencia, alrededo- res de Serradilla (prados de la Vega del Estanque), vegas del Tietar. Fl. Junio, Julio. A. Iva Schreb.= Pimienta de la sierva.—Crece en los sitios humedos de la cordillera central de San Pablo. Fl. Abril, Julio. A. Chamepithys Schreb.—=Zorrera, Melenos.—is una especie bastante frecuente en la mayor parte de la provincia, Plasen- cia, Caceres. Fl. Abril, Julio. Teucrium Pseudo-Chamepithys L..—Crece en los campos ari- dos de Caceres, Trujillo y Logrosan; menos frecuente en los matorrales de la cordillera central de San Pablo, Serradilla, Plasencia. Fl. Abril, Junio. T. Scorodonia L.—Habita con predileccién en la parte meri- dional y central, Talavan, La Barquilla, Casas de Millan, cues- tas del Tajo en la via férrea portuguesa. Fl. Julio. T. resupinatum Desf.—Crece en el cerro del Calamoco, cami- no de Serradilla a Plasencia. El Sr. Rivas y Santos dice la ha visto en los alrededores de la Cruz del Cancho (cordillera cen- tral de San Pablo, Serradilla). Fl. Abril, Julio. T. spinosum \..—Crece en los montes de la sierra de Mirabete. Fl. Junio. T. Botrys \..—Se encuentra bastante abundante en los cam- 220 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (170) pos de Plasencia, junto 4 la carretera de la Cruz de los Corde- les, Casas de Marcos. Fl. Agosto. T. scordioides Schreb.—Es muy frecuente en los montes ore- tanos, Montanchez, San Pedro; también se encuentra en el puerto Castano de la cordillera central de San Pablo. Florece en Julio. T. Chamedrys L.=Camedrios.—Se encuentra bastante comin en la parte montana de Plasencia, Serradilla, Torrején , Cace- res. Fl. Abril, Agosto. —El vulgo usa las infusiones hechas con la sumidad del Camedrio como un excelente sudorifico. 7. montanum L.—Crece, aunque muy escasa, en la cordillera central de San Pablo. Fl. Abril. T. aureum Schreb.—Suele encontrarse en los montes de la region central, Serradilla. Fl. Julio, Agosto. , 7. Polium L.=Zamarrillas, Zajonera, Palomilla menov.—Muy frecuente en los montes de toda la provincia, Plasencia. Flo- rece en Agosto.—La infusién hecha con la sumidad florida la usan como sudorifico. T. capitatum L.—Muy frecuente en los montes de la cordi- llera central de San Pablo, sierra del Piornal. Fl. Agosto. T. Guaphalodes Vahl. T. Funkianum Willk.—Crece en los montes de Garrovillas, cuestas del Tajo, en la via férrea por- tuguesa. Fl. Abril, Agosto. FAMILIA Verbenaceas. Verbena officinalis L.—Especie muy comun en las praderas de Plasepcia, Valle de Plasencia, Serradilla. Fl. Junio, Sep- tiembre. V7. supinad L.=Verbena, Planta contra las calenturas.—Crece muy abundante junto 4 las paredes de los poblados, Serradi- lla, Plasencia, Caceres. Fl. Abril, Septiembre.— Es una planta que goza de una verdadera fama como febrifugo, para lo cual esperan 4 que empiecen a aparecer las flores, en cuyo estado la recolectan y hacen luego cocimientos con la sumidad. El cocimiento sdlo lo pueden tomar cuando de antemano se han purgado. a7) Rivas Mateos.—¥FrLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 25) FamiLtiA Plantaginaceas. Plantago Cynops L.=Zaragatona.— Muy frecuente en los te- rrenos aridos de la parte occidental, Casas de Millan, Arroyo del Puerco, Aliseda, San Vicente, como también en Plasencia y Caceres. Fl. Mayo, Junio. P. arenaria Waldst.— in las praderas arenosas, cuencas de los rios y arroyos, Tajo, Serradilla, Plasencia, etc. Fl. Mayo. P. Psyllium U.=Zaragatona, Pulicaria.— En los barrancos, praderas y jarales de Serradilla, San Antén (Caceres), alrede- dores de la Virgen del Puerto (Plasencia). Fl. Mayo. P. Leftingii L.—Muy comin en las praderas limitrofes a Santa Catalina (Serradilla), Valle de Plasencia, Bazagona, campos de Caceres. Fl. Mayo. P. Lagopus U.= Pie de liebre.—Se encuentra en los prados de Plasencia, dehesa de Casas de Marcos (Malpartida), etc. Fl. Abril, Mayo. P. lanceolata L.=Llantenillo.—Comim en los prados de toda la provincia, notandose mas su predominio en la parte septen- trional (Plasencia y Valle). Fl. Abril, Junio. P. albicans L.—Entre las diversas formas que existen de esta especie, las mas comunes son % /ongifolia y y angustifo- lia; mas escasa la 8 latifolia; Plasencia, Valle, Bazagona y campos de Caceres. Fl. Mayo, Junio. P. Bellardi A\l.—Es muy frecuente en los sitios arenosos y barrancos de la cordillera central de San Pablo, Plasencia. Fl. Abril, Agosto. P. carinata Schrad.—Se encuentra en la parte alta del Valle de Plasencia, Tornavacas, sierras de Dios Padre, Gata y Gre- dos. Fl. Julio. P. acanthophylla Duesne.—Solo hemos podido encontrar al- guno que otro ejemplar en los campos limitrofes a Canaveral y Plasencia. Fl. Junio. P. maritima L.— "specie bastante comtin en los terrenos saliciferos de Caceres, como igualmente en las cueneas del Tajo (puente Mantible y Derriscadero). Fl. Agosto. P. crassifolia Forsk.— Ein los alrededores de Valencia de- Alcantara, cuencas del Tajo, Bazagona. Fl. Agosto. 252 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (172) P. Coronopus L.= Planta terrera.—Especie muy comun en las praderas y cerros de la mayor parte de la provincia, Serra- dilla, Plasencia, Caceres, Trujillo. Fl. Abril, Agosto. P. media V..=Llantenillo.— Muy comun en los valles y sitios liiimedos de toda la provincia.—Fl. Junio, Agosto. P. major L..=Llantén, Lechuga de agua.—F¥recuentisima en las regaderas de las huertas, sitios himedos y sombrios de toda la provincia. Esta especie escasea en la parte occidental. Fl. Abril, Septiembre. fips yey Jeu Jk SUR LES HUMASTACIDES TRIBU DES ACRIDIODEA PAR MADLCCOLM BURR (Continuacion) (1). (Sesi6n del 1.° de Junio de 1898.) EPISACTI. Les Lpisacti renferment les seuls genres américains a tarses postérieurs denticulés, qui les rapprochent des genres asiati- ques, Hrucius etc. Us forment un groupe tres particulier, ca- ractérisé surtout par cette denticulation, ainsi que par le ver- tex plus ou moins aigu, et non pas arrondi, comme chez les Eumastaces, proprement dits, et en outre par armature des jambes antérieures en dessous, qui les rattachent aux groupes américains. Il n’y ena que deux genres, Hpisactus Br. et Pare- pisactus Gigl.-Tos, mais il est vraisemblable qwon en décrira d’autres encore, aussito6t que de nouvelles collections arrivent de PAmérique du sud. 14. Genus Episactus 2B. (éxetsaxtog adventicius.) Apterus. Vertex inter oculos plus minus productus, cum fronte angulum acutum efficiens; frons reclinata; oculi oblon- vi. Pronotum compressum, medio carinatum, carinis latera- (1) Véase la pag. 75 de este tomo de los ANALES. 254 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (40) libus nullis. Elytra et ale nulla. Pedes graciles, longi; femora postica carina superiore obsolete denticulata; tibiee postice calearibus terminalibus intus singulo magno, extus binis mi- nimis armate; metatarsus posticus hirsutus, spinulosus. Ab- domen gracile, compressum, carinatum. Lamina supraanalis margine postico medio profunde rectangulariter excisa. Lami- na subgenitalis magna, elongata, incurva, apice obtusa, mar- wine postico (Superiore) denticulata. Cerci conici, validi, in- curvi, apice vix decussati. FLpisactus Brunner. 1893. Ann. Mus. Civ. Gen. (2), xm, 115. Episactus Giglio Tos. Ce genre remarquable est unique parmi les Humastacides américains en ce que toutes les autres espéces, jusqu’ici con- nues, ont le métatarse inerme. Species Unica. 1. Episactus Brunneri sp. n. Fusco-testaceus. Caput nigrum; frons valde reclinata; oculi oblongi, nigri; antennz fusce. Pronotum fuscum, antice ro- tundatum, postice truncatum, apice et postice medio levissi- me excisum; lobi deflexi que alti et longi, marginibus antico et inferiore obliquis, margine postico recto; angulis rotunda- tis. Abdomen compressum, fusco-testaceum, dorso carinatum, subtus basi fuscum, apicem versus pallidum; segmentum anale rufum, magnum. Cerci rufi. Lamina supraanalis et subgenitalis rufe. Pedes graciles, fusco-testacei. Tibiz antic et intermedi infra utrinque spinulose. Femora postica uni- coloria, carina superiore obsolete denticulata; g@enubus afris. Tibive postice spinulis nigris. Tarsi testacei, hirsuti, spinulis articulis unguiculisque nigris. ¢/. Long. corporis oY 13,75 mm. — pronoti 3 — femorum posticorum 13 PATRIA. Guatemala. (Coll. Brunner, n° 6983. Typus.) lb. Genus Parepisactus (ig/io-7os. (xaga Episactus.) Corpus granosum et rugosum. Femora antica margine an- tico infero spina vel dente preapicali nulla. Costa frontalis (41) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 255 angusta, profunde sulcata. Tarsorum posticorum articulus primus supra in utroque margine serratus. Elytra et ale nulla. Clypeum faciale angulis infero-lateralibus prominulis. Fasti- gium capitis ante oculos modice productum, subhorizontale apice rotundato, supra medio carinulatum. Antenne brevius- cule, crassiuscule, 10-articulate. Oculi ovoidei. Pronotum su- pra granosum, carinula media producta instructum; carinulis lateralibus sinuatis a sulco postico in lobis deflexis perspicuo, in dorso deleto, interruptis; margine antico truncato; margine postico medio rotundato, emarginato. Mesonotum et metano- tum granosa, medio carinulata. Abdomen compressum, medio dorso totum carinatum et granosum. Pedes longiusculi. Fe- mora omnia, precipue postica, Carinis omnibus minute serra- tis. Lamina subgenitalis brevis, subglobosa. Tibize posticze margine interno spinis majoribus et minoribus alternis ar- mate. Parepisactus Giglio-Tos. Boll. Mus. Tor. 1898, xin, n° 311, p. 36. Ce genre est voisin de Hpisactus Br., surtout par Varmature du métatarse postérieur, et aussi par la forme de la téte, et enfin par l’absence des organes du vol; il en differe principa- lement par la forme de la plaque sousgénitale du male, qui est, dans Hpisactus, allongée, lanceolée, obtuse, et ornée au bord postérieur de dents tres fins, tandis que dans ce genre elle est sphérique, tres courte, et tout-a-fait privée des dents au bord postérieur; il differe en outre par la serrulation de toutes les carenes, de toutes les cuisses, et par la présence de ‘arenes latérales du pronotum. Species unica. 1. Parepisactus carinatus (ig/i0-7os. cf Piceus, granosus: clypeo faciali testaceo-livido; antennis nigris, segmentis duobus basalibus flavis; pleuris testaceis; pedibus testaceis irregulariter fusco-fasciatis et maculatis; femoribus posticis dimidia parte basali testacea; tibiis posticis fuscis, irregulariter testaceo-cinctis. Gene granose. et rugu- lose. Occiput cum fastigium verticis medio carinulatum, utrinque minute granulosum. Femora postica basi valde in- 256 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (42) crassata, dehine filiformia; carina media supera in dentem acutum producta, angulis lobisque genicularibus spinosis. Tibize posticee utrinque spinis 14-15 armate. Lamina supra- analis brevis, minuscula, triangularis. Cerci breves, graciles, cylindrici. Lamina subgenitalis brevis, sub-globosa, apice truncata. Long. corporis 12mm. — pronoti 2 — femorum posticorum 10 — tibiarum posticarum 10 Parepisactus carinatus Giglio-Tos. 1896. Boll. Mus. Tor. xi, Ne ole, Pious Parria. Pun, Equateur (Giglio-Tos). A la description donné par M. Giglio-Tos j’ajoute que le fastigium du vertex, vu de profil, parait étre un peu recourbé a la base & la maniere d’un crochet. CHINA. Je fais ce groupe pour une seule espece, décrite par Walker. de Chine. Elle représente le passage entre les #rvcii et les Fumastaces. Le métatarse est celui @un J/as/az, les épines des tibias postérieures, étant, cependant, celles @un #ruecius. 16. Genus China Burr. Habitus Hrucii. Differt metatarso postico inermi, hirsuto tantum. A genere Humastaci differt spinis tibiarum postica- rum longitudine inter se equantibus, nec alternantibus. 1. China mantispoides (J/’1//. ) Vertex rotundatus; oculi badii; pronotum selliforme, fus— cum. Elytra et ale hyalina, immaculata; abdomen fuscum; femora testacea, fusco-maculata; tibie antice subtus spinu- losze; tibize postice fuscee, pallide annulate, spinis «quanti- bus: tarsi postici albidi, hirsuti; lamina supraanalis rotundato- emarginata; lamina subgenitalis obtusa: cerci o bifurcati, inter se amplexi, decurvi i 1) «Vox sensu carens » (48) Malcolm Burr.— mssaI SUR LES EUMASTAGIDES. 257 Long. corporis 3S 18mm. — elytrorum 19 — femorum posticorum 11 Mastax mantispoides Walk. 1870. Cat. Derm. Salt. tv, 792. Parria. China. (Walk. Brit. Mus. Typus.) EUMASTACES. Les Humastaces sont le groupe typique des AHumastacides. Ils sont particuliers & Amérique du sud, sauf le genre unique Morsea, de Californie. Ils sont caractérisés par les métatarses postérieurs désarmés, par les pattes longues et gréles, et par les jambes antérieures armées en dessous dans la partie api- cale d’épines petites et gréles. 17. Genus Eumastax nov. nom. (cv Prefix. Mastax. pasta — Locusta.) Species minores. Vertex rotundatus, in costam frontalem transiens; costa frontalis inter antennas angustissima. Anten- nee breves, graciles, apice infuscate, basi coloratee. Oculi pro- minuli. Pronotum parvum, angustum, carinula media subtili instructum, margine postico rotundato, margine antico recto. Elytra abbreviata vel perfecte explicata, angusta, apice rotun- data et ampliata, hyalina, haud confertim reticulata. Ale, quum adsunt, magne, late, rotundate, hyaline. Abdomen gracile, breve. Pedes longi, graciles, tibiz antice subtus in parte apicali utrinque spinulose; tibiee posticee spinis margi- nis interioris longitudine alternantibus; metatarsus posticus inermis, vel hirsutus. Genus americanum. Mastaz Perty. 1830. Delect. An., p. 122. Blanch.. Serv., Burm., Stal, Brunner, Karsch., Gerst. Typus generis Mastax tenuis Perty. Dispositio specierum. 1. Apex verticis super oculos, a latere visus, haud discretus. 2. Elytra et alee perfecte explicata. ANALES DE HIST. NAT.— XXVIII, 17 258 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (44) 3. Femora postica unicoloria, testacea, vel olivacea, nigro- carinata, necnon indistincte fusco-notata, lineis trans— versis nullis. 4. Oculi unicolores. 5. Pronotum testaceum vel ferrugineum, utrinque Vitta nigra ornatum. 6. Cerci incurvi. Statura minore. Colore testaceo, nigro-varie- Eat0..t.4- PPE tie a Me ie 8 7 Ae eS 1. tenuis Perty. 6.6. Cerci recti. Statura mediocri. Colore lete ferrugineo, DIS TO VALICMAOS Ns 2s = aisle ha ee pete ae 2. vittata m. 5.5. Pronotum unicolor testaceum. 6. Abdomen fuscum, segmentis 2 dorsalibus penultimis lete sanguineis. Statura minore..... .... 3. Poultoni m. 6.6. Abdomen fulvum, haud sanguineo-ornatum. Statura INAJOTCs ners: onc ae eee ee eee 4. plebeja Gerst. Ad: soni DiCoOlores =4 cere e eee erat twa he, ». semiceeca B7. 3.3. Femora postica versicoloria, vel lineis transversis ornata. 4. Femora postica apicem versus rufescentia. 5. Abdomen-anicolor, fusciums. cece. on. e 6. collaris Gers?. 5.5. Abdomen testaceum, lateribus flavo-vittatum........... er GW hth ae fac Beer RGR ee ete cate 7. surda m. 4.4. Femora postica haud rufescentia. 5. Femora postica pagina externa lineis regularibus transver- Sis/OTM Atavieas or Aeitsek: sree esore 8. tipularia Ge7s/. 5.5. Femora postica irregulariter nigro-maculata.......... ok baa Peoatue 5 (ada tiesto) ee ts birw 'w oiw Sine lees ar POU lek Te 2.2. Elytra rudimentaria. Ale nulle. 3. Colore toto fusco. Pronotum postice leviter triangulariter emarginatum, carinula media instructum......... ape Sl meles ty Beem ole eect aes teehee 10. surinama m. 3.3. Colore fusco, pronotum lete ferrugineum, postice rotun- dato-emarginatum, carinula nulla instructum; abdo- men apice ferrugineum......... 11. Rosenbergi in. 1.1. Apex verticis, super oculos, a latere visus, discretus. 2. Lobi deflexi pronoti angulo antico rotundato......... eee ole these Siniv ete eee Ae ae eng a eee 12. militaris Gers?. 2.2. Lobi deflexi pronoti angulo antico obtusangulo......... Se vise ded 5 Voc tate deastaee magn Netateaed ... 13. versicolor m. (45) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 259 1. Eumastax tenuis (Pe7'/y). Statura minore, flavo-virescens. Caput fuscum; fastigium angustissimum, tricarinatum; frons fulva; occipite nigro- maculatum; oculi magni, nigri; antenne atre, segmentis basalibus duobus exceptis albidis. Pronotum antice subrectum, postice subrotundatum, disco virescenti, utrinque fascia an- gusta nigra ornato; carinula media subtili, sulco transverso vix distinguendo, carinula quoque ante sulcum sinuata obso- letissimo instructum; lobi deflexi fulvi, longiores quam altio- res, angulo antico rotundato, angulo postico rectangulo. Ely- tra et ale perfecte explicata; illa angusta, virescentia, venulis infuscatis, venis radialibus a basi per dimidiam longitudinem contigue, dehine vena radiali postica retrorsum divergenti, furcata, area discoidali vena intercalata recta, apice sinuata instructa; he ample, hyaline. Pedes graciles, testacei; femo- ra postica testacea, nigro-carinata, genubus infuscatis; tibie postice infuscate, prope basin pallido-annulate, vel testacex. Abdomen fuscum vel testaceum; cerci conici, fusci, incurvi; lamina supraanalis margine integro; lamina subgenitalis pro- funde fissa. o” 9. Long. corporis “11-13 mm. ? 20mm. — pronoti 1,8-2,5 — elytrorum 9-1] 13 — femorum posticorum 10,5-12 Mastax tenuis Perty. Delect. Anim. Brasil. 123, tab. xxiv, fig. 3. Serv. Orth. 750. 1839. Burm. 1839. Handb. 11. 653. Walk. 1870. Cat. Derm. Salt. iv. 791. Gerst. 1888. Mitth. Neuvorp. Rugen. xx, x1x, 47 (88). Karsch. 1889. Ent. Nach. xv, 31, & 36. Mastaz virescens Westw. 1841. Arc. Ent. 1, p. 100. Mastaz minuta Bol. 1881. An. Soc. Esp. x, 481. Bol. 1884. «Viaje al Pacifico, 31. Karsch. 1889. Ent. Nach. xv, 36. Giglio-Tos. 1898. Boll. Mus. Tor. x1, n° 311, 88. ParriA. Brézil, province Piauhiensi (Perty): Brézil (Serv.); 260. ANALES DE HISTORIA NATURAL. (46) Equateur, Santa Rosa (Bol.); Equateur, Gualaquiza, Santia— go, Zamora (Giglio-Tos); Para (Hope Mus.); Amazones, Fon- teboa, Perou, Saracayon (Gerst.) Je crois que le type se trouve dans le Musée de Miinchen. 2. Eumastax vittata sp. n. Caput supra fuscum; vertex angustus, inter oculos tricarina- tus, carinula media interdum obsoleta; frons flava, clypeo vi- rescenti; antennee fusce, segmentis duobus basalibus excep- tis virescentibus; gene flave; oculi nigri, fusci. Pronotum antice et postice subrectum, carina media longitudinali, cari- nula transversa arcuata subtili vel obsolete instructum ; lobi deflexi fere seque alti et longi, angulo antico rotundato, pos- tico rectangulo, margine inferiore subsinuato, postico verti- cali; pronotum disco testaceo, vitta utrinque nigra ornato, lobis defiexis fulvis, vitta lata lete ferruginea per metapleu- ras abdomenque producta ornatis. Elytra et ale perfecte ex- plicata, maris abdomen superantia, femine abdomine brevio- ra; illa cervina, he hyaline, vitree. Femora omnia ferrugi- nea; tibize infuscate ; tarsi virescentes; femora postica nigro- carinata, genubus infuscatis. Abdomen gracile, fusco-testa- ceum, fusco-ornatum, utrinque vitta ferruginea plus minus distincta ornatum: segmentum ultimum infuscatum. Cerci maris atri, recti, obtusi, hirsuti. Lamina supraanalis maris margine integro. Lamina subgenitalis maris magna, forni- cata, media carinula longitudinali instructa, apice medio triangulariter leviter emarginata; femine triangulariter pro- ducta. Valvule ovipositoris longe, crenulate. o . Long.corporis of 14,5-15,5 mm. © 20-23,5 mm. — pronoti 2-2,5 3 — elytrorum 11,5-13 12,5-13,5 — fem. post. 11-13 13,5-14 ParriA. Bolivia, Songo, Farinas, Suapi. (Coll. Brunner, n° 21.048, 21.075, 21.511, 21.133.) Alto Ama- zonas (Bolivar). (Typus in coll. Brunner, n° 21.048.) (47) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 261 3. Eumastax Poultoni sp. n. Statura minore. Caput atrum; frons pallidior, media macula fusca ornata. Pronotum unicolor olivaceum, margine antico rotundato, postico ?; lobi deflexi angulo antico rotundato, pos- tico rectangulo? margine inferiore sinuato. Elytra et ale per- fecte explicate; illa cervina, brunnea, he hyaline. Pedes gra- ciles, olivacei, tibiis nigro-carinatis, femora postica olivacea, nigro-carinata. Abdomen breve, fuscum, dorso carinatum, utrinque vitta angusta laterali, primum sanguinea, deinde citrina ornatum, in segmenta dorsalia 2 penultima percur- renti, leta sanguinea. Lamina supraanalis margine integro; lamina subgenitalis magna, pubescens, rotundata, incurva, margine postico (superiore) sulco profundo transverso instruc- to, apicem tuberculum rotundatum efficienti. Cerci recti, ni- eri, obtusi; inter cercos processus triangularis, deplanatus <7. Long. corporis o 13 mm. — pronoti 2,5 — elytrorum 8 — femorum posticorum ll Patria. Columbia (Mus. Hope. Typus). Nous nous faisons un plaisir de dédier cette jolie espece a M. le Prof. Poulton, le savant professeur de Zoologie a Oxford. | Elle est tres petite; les derniers segments dorsales de Pabdo- men sont d’un rouge vif et luisant. , 4. Eumastax plebeja ((e7's/.) Elytris alisque breviusculis, illis linearibus, fulvo-tinctis, his obtuse rotundatis, vitreis; ferruginea, opaca, vertice genu- busque posticis fusco-olivaceis, antennis basi excepta brun- neis, tibiis posticis testaceis. ©. Long. corporis Q 21 mm. — elytrorum 15 Mastazx plebeja Gerst. 1888. Mitth. Neuvorp. Rugen. xrx, xx, 89. Parria. Amazones, Fonteboa (Gerst.) Je ne connais pas cette espéce, & je me borne a citer la des- cription de Gersteecker: 262 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (48), «Grosser und kriftiger als Mast. tenwis, welcher diese Art zuniachst ist. Fiihler kiirzer und derber, rothbraun, an der Spitze dunkeler, die beiden grossen Basalglieder licht rostfar- ben. Von letzterer Farbung auch der Kopf bis auf den matt eraubraunen Scheitel; die beiden Mittelkiele der langen Stirn dicht geniihert und bis zum Unterrand reichend. Prothorax einfarbig rostroth, matt; der vom Hinterrand:-des feinnarbi— gen Sattels ausgehende schwache Mittelkiel gegen den Vor- derrand hin verloschen. Die Deckfliigel fast gleichmissigg¢ gelbbraun getiincht, gegen die Basis des Costalfeldes hin licht pechbraun; Hinterfltigel glashell mit pechschwarzer Aderung. Beine von Korperfarbe, die Kanten der Hinterschenkel und die Spitze an den Dornen der Hinterschienen pechschwarz, die Hinterkniee nur leicht gedunkelt, olivenbraun. Die 28 Dornen in der Innreihe de Hinterschienen jenseits der Mitte abwechselnd langer und kiirzer. Hinterleib ledergelb, ober- halb mit griinlicher & briunlicher Scheckung; der Ovipositor diinner als bei Mast. tenuis, mit viel schwicher gesdgten Kan- ten, einfarbig rostbraun.» 5. Humastax semicseca Bruner. Olivacea, fusco-variegata. Caput fuscum, fronte fulva, ge- nis antice fulvis, postice fuscis, linea angusta postoculari flava ornatis; oculi bicolores, supra nigri, infra flavi; antennee ? Pronotum olivaceum, dorso vitta nigra utrinque longitudinali ornato, medio carinato, marginibus antico et postico subsi- nuatis; lobi deflexi angulo antico rotundato, postico rectan- gulo, marginibus subsinuatis. Sternum fulvum. Pedes graci- les, olivacei, fusco-variegati (tibiz antic in parte apicali utrinque spinulose) femora postica fulva, nigro-carinata, pa- gina interna maculis duabus ferrugineis ornata, genubus fus- cis, pallido-variegatis; tibize posticee fuscee prope basin pallido- annulate, spinulis fuscis. Elytra et ale perfecte explicata, hyalina, venulis fuscis, apud feminas saltem abdomen haud superantia. Abdomen gracile, flavum, lineis atris longitudina-. libus duabus utrinque lateribus ornatis, dorso infuscato, cari- nato. Venter fulvum. Valvule ovipositoris pallid, valide, serrulate, apice infuscate et mucronate. Q. (49) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES KUMASTACIDES. 268 Long’. corporis 20 mm. — pronoti 3 — -elytrorum 13 — femorum posticorum 138 Mastax semicecus Brunner. 1897. Observations on the colours of Insects. 15, fie. 118. Patria. Alto Amazonas (coll. Brunner, n° 16.570. Typus.) Cette espéce se distingue facilement par les deux couleurs des yeux. M. Brunner von Wattenwyl a attiré Pattention sur cette coloration curieuse dans Vouvrage cité, oti il suggére Vidée que, parce que la couleur inférieure des yeux est une couleur opaque, peut-étre linsecte est aveugle dans cette par- tie des yeux. On ne peut démontrer la vérité de cette théorie sans observer l’animal vivant, avec beaucoup d’expériences, comme celles que Sir John Lubbock a faite sur les fourmis. 6. HEumastax collaris (Ge7s/.) Fusco-testacea. Caput fuscum, fronte pallidiori; antennse oculique nigri. Pronotum testaceum, medio obsoletissime ca- rinatum, antice et postice rotundatum; lobi deflexi antice ro- tundati, margine postico recto, angulis rotundatis. Elytra oli- vaceo-hyalina, venulis nigris. Ale ample, in modo elytrorum colorate. Pedes fusco-testacei. Femora postica fusco-testacea, nigro-carinata, apicem versus rufa, genubus pallidis, atro- notatis. Tibise posticee fusco-testacee , nigro-carinate, basi annulis binis indistinctis pallidis ornate, spinulis nigris, basi pallidis, tarsi fusci. Abdomen gracile, fuscum. Valvule ovi- positoris rugosee, denticulatee, apice mucronate. &. Long. corporis © 18 mm. — pronoti 3.2 — elytrorum |! — femorum posticorum 14,5 Mastax collaris Gerst. 1888. Mitth. Neuvorp. Rugen. x1x & xx, 8h Karsch. 1889. Ent. Nach. xv, 36. Patria. Perou (coll. Brunner, n° 18.981). Saracayon, Perou (Gerst.), Bolivia, Paramba (Rosenberg, coll. m.) 264 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (50) 7. Eumastax surda gp. n. Testacea; vertex obsolete tricarinata; frons unicolor; oculi magni; gen paullo infuscate. Pronotum unicolor, testaceum, antice subrectum, postice late rotundatum, carinula media instructum; lobi deflexi longiores quam altiores, angulo antico valde rotundato, postico rectangulo, margine inferiore sub- recto, postico recto. Elytra et ale perfecte explicate; illa vi- trea, he hyaline, abdomen haud superantia. Pedes antici et intermedii testacei; femora postica in parte basali testacea, nigro-carinata, in parte apicali rufescentia, lobis geniculari- bus in spinas productis; tibiee postice infuscate. Abdomen testaceum, utrinque vitta flava longitudinali percurrenti or- natum. Valvul ovipositoris longe, crenulatie. 2. Long. corporis 2 18mm. — pronoti 3 — elytrorum 10 — femorum posticorum 13 Patria. Chiriqui, Perou (coll. Brunner, n° 21.081. Typus.). Voisin de #. plebeja (Gerst.), espece que je ne connais pas. Il en différe par sa taille plus petite, et par la couleur des cuisses postérieures. 8. Eumastax tipularia / G¢e7s/.) Gracilis. Caput flavum; occiput lineis duabus obsoletis fus- cis ornatum; frons reclinata, citrina, genis vitta nigra post- oculari ornatis; oculi prominuli, nigri; antenne nigre, basi flave. Pronotum antice rectum, postice rotundatum, disco testaceo; lobi deflexi antice rotundati, margine inferiore si- nuato, margine postico obliquo, angulo postico rectangulo, rosei, muargine inferiore pallide-marginati. Elytra angusta, apice latiora, rotundata; ale hyaline, elytra et ale vitrea, ve- nis fuscis. Pedes graciles; antice testacee, fusco-annulate, tibize antice utrinque subtus in parte apicali spinulose; pedes intermedi testacewe, fusco-variegatze. Femora postica testa- cea, nigro-carinata, carinis haud serrulatis, apicem versus infuscata, pallide annulata, genubus atris; tibie postice in- fuscate , basi pallico-annulate, spinulis nigris, basi pallide- (61) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 265 annulatis. Abdomen gracile, testaceum, fusco-variegatum. Lamina supraanalis maris medio in brevem lobum rotunda- tum producta; lamina subgenitalis magna, obtusa, apice ipso subtus obsoletissime carinulata. Cerci longi, pubescentes, un- dulati, apice incurvi, haud decussati, pallidi, apice infuscati. Lamina subgenitalis feminz recta, acuta. Valvule ovipo- sitoris long, recte, pubescentes, serrate, apice mucrona- te. JQ. Long. corporis of l6émm. Q 21 mm. — pronoti 3 — elytrorum 16,5 — fem. post. 13 14,5 Mastax tipularia Gerstaecker. 1888. Mitth. Neuvorp. Rugen. xix & xx, 83: Karsch. 1889. Ent. Nach. xv, 36. PaTrRIA. Saracayon et Jurimaguas, Perou (Gerst.) Alto Amazonas (coll. Brunner, n° 16.174). Cette belle espece se distingue de 7. pardalina par la cou- leur des pattes, et des élytres, d’un refiet bleuatre. 9. Kumastax pardalina sp. n. Statura majore. Caput testaceum, occipite macula magna fusca ornata, genis vitta nigra infraoculari, trans lobos de- flexos pronoti producta ornatis; frons parum reclinata, fusco- notata; oculi nigri. Pronotum testaceum, fusco-notatum, an- tice rectum, postice in angulum obtusum productum, carina media, sulco medio transverso instructum; lobi deflexi super- ne vitta lata rosea, per metapleura producta ornati, antice ro- tundati, subtus sinuati, postice verticales, angulo postico rec- tangulo. Metapleura testacea. Elytra basi angusta, dehine latiora, apice rotundata, hyalina, virescentia area mediastina angusta, vena radiali fortiori, fusca, area anali angusta, re- gulariter reticulata. Ale ample, elytris breviores, hyaline. Pedes graciles, testacei, fusco-ornati, genubus posticis atris; tibiz postice apicem versus infuscate; tibie antice infra utrinque spinulose; tarsi fusci, testaceo-annulati. Abdomen compressum, fuscum, valvulze ovipositoris elongate, denticu- late. 2. 266 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (52) Long. corporis © 21 mm. — pronoti 2,75 — elytrorum §18,5 — fem. post. 15 ParriA. Perou (coll. Brunner, n°’ 10.337. Typus.) Cette jolie espece se distingue par la couleur des pattes, d’un jaune pale, ornées de taches et de bandes noires. Les bandes carminées des cotes rabattues du pronotum ressemblent beau- coup a celles de #. tipularia Gerst., mais dans cette derniere espéce elles sont bien plus courtes el les bandes noires man- quent. 10. Kumastax surinama sp. n. Fusco-olivacea. Caput fuscum, testaceo-variegatum , fronte pallidiori; antenne nigre, segmentis basalibus duobus excep- tis pallidis, apice leviter incrassatee. Pronotum olivaceum, utrinque vitta nigra ornatum, antice rectum, postice leviter triangulariter emarginatum, carinula media instructum; lobi deflexi angulo antico rotundato, postico rectangulo, margine inferiore subrecto. Elytrorum alarumque rudimenta nulla. Pedes olivacei; femora tibizeque postica olivacea, nigro-cari- nata, genubus infuscatis. Abdomen gracile, olivaceum. La- mina subgenitalis maris arcuata. Cerci maris breves, recti. Valvule ovipositoris breves, crenulate. ¢7 ©. Long. corporis. ¢o 13mm. 92 19 mm. — pronoti 2 2,0 — fem. post. 10 14 Patria. Surinam (ma collection, n° 584, 585. Typus). J’ai recu ces exemplaires de Surinam ia copuld; il est done impossible d’examiner la plaque supra-anale du male sans les déranger, ce que je ne veux pas faire, parce que c'est bien intéressant de voir la position des cerques et des valvules de Voviscapte (voir la figure). 11. Kumastax Rosenbergi sp. n. Statura minore. Fusco-testacea. Caput fuscum, fronte palli- diori. Pronotum ferrugineum, necnon linea fusca longitudi- nali media ornatum, antice rotundatum, postice medio leviter excisum, rotundato-emarginatum: lobi deflexi marginibus (58) Malcolm Burr.— FSSAI SUR LES EUMASTACIDES. 267 rectis, angulo antico valde rotundato, angulo postico rectan- culo. Elytra minima, lateralia, lobiformia, acuminata, fusca; ale nulle. Pedes testacei, fusco-carinati genubus concolori- bus; tibize fusco-testacee; tarsi infuscati. Metapleura atra. Ab- domen carinatum, fusco-testaceum, segmentis tribus ultimis ferrugineis. Lamina supraanalis medio late excisa; lamina subgenitalis magna, incurva. Cerci minimi, cylindrici, incur- vi, decussati, atri. 97. Long. corporis 7 13-14,75 mm. — pronoti 1,75-2. — elytrorum i — fem. post. 12,25 Patria. Colombie, Pielrindé, Décembre, 1894. Alt. 11.500 pieds (coll. mea. n° 578-581. Typus). Je dédie cette espéce & M. W. F. H. Rosenberg, qui a enri- chi ma collection de beaucoup d’Orthoptéres de Colombie et de ’Kquateur. Type dans ma collection. 12. Eumastax militaris (Gers/.) Caput fuscum, genis pallido-ornatis; frons pallida, fusco- ornata; oculi nigri; antenne nigre, basi sulfuree. Pronotum antice et postice rotundatum, obsolete carinatum, olivaceum, lateribus necnon disco atro-vittatum; lobi deflexi aurantiaci. antice rotundati, postice recti, margine inferiore sinuato, an- gulo postico maris acuto, femine rotundato. Elytra vitrea, venulis fuscis; ale hyaline, leviter infumate. Pedes testacei, atro-variegati; tibiae antice in parte apicali utrinque subtus spinulosee; femora postica testacea, nigro-carinata, necnon nigro-ornata, genubus atris; tibie infuscate, spinulis nigris. Abdomen aurantiacum, fusco-variegatum; segmentum anale atrum. Lamina supraanalis maris margine fere recto, lamina subgenitalis margine postico (superiore) sinuato. Cerci atri. a 2 Long. corporis o7 15mm. Q 18,25 mm. — pronoti 2,5 3 — elytrorum 1} 12,25 — fem. post. 13 14 Variat. Colore fuscum, abdomine fusco, fronte fusca. 8 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (54) Mastaz militaris Gerst. 1888. Mitth. Neuvorp. Rugen. xrx & xx, 84. Karsch. 1889. Ent. Nach. xv, 36. Parria. Olivenca, Fonteboa, Amazonas (Gerst.) Alto Ama- zonas (coll. Brunner, n° 14.163; coll. Bol., coll. M., n° 582). Cette espéce se distingue par ses couleurs oranges et noires. 13. Eumastax versicolor sp. n. Aurantiacus, viridi-variegatus. Occiput fuscum; fastigium verticis inter oculos vix productum, cum fronte angulum acu- tum efficiens, a latere visum tnberculum conicum super oculis formans, concavum a supero visum; frons geneque flave; antenne crassiuscule, nigre, segmentis duobus primis excep- tis flavis. Pronotum parvum, antice subrectum, postice rotun- datum; lobi deflexi angulo antico obtusangulo, postico acut- angulo, margine infero obliquo; color pronoti fusco-viridis, media carina subtili flava, lateribus vitta lata aurantiaca, per metapleura abdomenque usque ad genitalia perducta ornatis. Elytra et ale perfecte explicata, abdomen valde superantia, hyalina, cyanea. Pedes graciles, antici et intermedii olivacei; femora postica flava, pagina externa regulariter viridi-lineata, carinis viridibus, genubus infuscatis, spinis genicularibus brevibus; tibizw postice cerulescentes, spinulis nigris. Abdo- men aurantiacum, viridi-vittatum. Corpus totum subtus flavi- dum. Lamina subgenitalis ampla, medio margine postico (su- periore) exciso. 9. Long. corporis © 16,5 mm. — pronoti 2 — elytrorum 15,5 =~ tem. post: | Tz PATRIA. Paraguay (Coll. Bolivar). 18. Genus Paramastax nov. gen. (naca, prefix, Mastaz.) HLumastaci vicinum genus; ab eo differt elytris coloratis, opacis, area mediastina irregulariter et conferte reticulata; alis coloratis, hyalinis aut opacis. (5) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 269 Typus generis, Mastax nigra Scudder. Mastax Scudder, Gersteecker, Bolivar, Karsch. Dispositio specierum. PAlwyalbse, ODAC ss i ccsc oe sccc ee cee era (OCUNG.) 1.1. Alee colorate, transparentes. 2. Cerci apice bimucronati. 3. Pedes antici et intermedii aterrimi....... 2. gaudens m. 3.3. Pedes antici et intermedii testacei vel rufescentes, haud nigri. 4. Femora postica apicem versus rufescentia... 3. vicina m. 4.4. Femora postica apice infuscata, haud rufescentia........ Bayes ads «Siskel ls 6] syehsl'sleaieaehetoversiomesetiakd, 4A AMI Gane) 2.2. Cerci apice haud bimucronati. 3. Corpus testaceum. Cerci longi, graciles, sinuati. Lamina supraanalis supra margine postico corniculis 2 acutis INISCEMECLA sis ter cleicins esktsv tes oo aidaic POs oO La GErSte) 3.3. Corpus cinereum, nigro-variegatum. Cerci conici, breves, validi. Lamina supraanalis margine postico lobis trian- gularibus obtusis instructa..... 6. personata (Bo/.) 1. Paramastax nigra (Scudd. ) Gracilis, fusca. Caput aterrimum, fronte pallidiore , necnon macula fusca ornata; antenne atre, basi pallide. Pronotum supra atrum, media vitta longitudinali pallidiori ornatum, antice rectum, postice in angulum obtusum productum; lobi deflexi longiores quam altiores, pallide-testacei, antice rotun- dati, postice in angulum acutum producti. Elytra longa, an- gusta, apice rotundata, fusca, area anali testacea. Ale ample, elytris breviores, opace, albe. Pedes fusci; femora antica et intermedia pallidiora; tibie antice inermes; femora postica fusco-olivacea, nigro-carinata; genubus atris; tibise postice tarsique infuscati. Abdomen pallide testaceum, vel citrinum, lateribus basi nigro-vittatum, segmentum ultimum nigrum, segmentis 8 & 9 variegatis. Lamina subgenitalis magna, in- curva, rotundata, margine postico (superiore) simplici. o Q. 270 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (56) Long. corporis ¢ 15mm. © 17,7 mm. — pronoti 2,70 3 -- elytrorum 17 19 — femorum posticorum 15 16 Maslaz nigra Scudder, 1875. Proc. Boston. Soc. Nat. Hist. xvi, 266. Karsch, 1889. Ent. Nach. xv, 36. Giglio-Tos, 1898. Boll. Mus. Tor. xin, n° 311, p. 38. ParriA. «astern slope of the Peruvian Andes» (Scudder). Perou (Coll. Brunner, n° 16.520). Amazones, 1867 (Mus. Hope). Bolivia (Coll. mea, n° 1.009, 1.010). Santiago, Equateur (Mus. Torino). Yurimaguas, Perou (Mus. Paris). Cette espéce, décrite il ya plus de vingt ans par Scudder, ne parait pas étre trés rare dans la partie nord-ouest de l’Amé- rique du Sud, et se distingue par sa couleur noire, avec les ailes toutes blanches et opaques. 2. Paramastax gaudens sp. n. Statura majore. Caput aterrimum, fronte genisque macula magna pallida ornatis; antenne nigre, basi pallide. Prono- tum ferrugineum, medio obsolete carinatum, antice rectum, postice leviter rotundatum: lobi defiexi antice rotundati, mar- gine inferiore sinuato, margine postico verticali. Elytra cin- namomea, conferte reticulata, venulis pallidis, interstitiis fus- cis. Alz elytris paullo breviores, cinnamomewx, haud opace. Pedes antici et intermedii aterrimi; femora postica pallida, testacea, nigro-carinata, carinis serrulatis, apicem versus lete purpurea, genubus aterrimis; tibize postice basi olivacee, apicem versus infuscate, spinulis aterrimis; tarsi atri. Abdo- men fusco-testaceum, vel testaceum. Lamina supraanalis pro- funde impressa. Lamina subgenitalis incurva, subtus carina- ta. Cerci validi, conici, apice adunci bimucronati, ferruginet, upice infuscati. Long. corporis o 17,75 mm. Y 21,75 mm. — pronoti 2,19 3,0 — elytrorum 4 16 — femorum posticorum = 14,25 16 (57) Malcolm Burr.—#ssAl SUR LES KUMASTACIDES. 271 Patria. Bolivia, Coroico, Songo, Bolivia (Coll. Brunner, n° 20.504, 21.022, 21.050). Cette belle espéce se distingue par la couleur de la téte, des organes du vol, et des jambes postérieures. Le type dans ma collection. 3. Paramastax vicina sp. n. P. gaudenti similis; ab ea differt, pedibus anticis rufis, in- termediis fulvis, antennis rufis, elytris brevioribus, fusciori- bus, alis eneo-nitentibus, cercis aterrimis, incurvis, nec mu- cronatis nec dentatis, apice attentingentibus. 0. Long. corporis oy 18mm. — pronoti 2,5 — elytrorum 1] — femorum posticorum = 13,5 Parria. Tuapi, Bolivia (Coll. Brunner, n° 21.512 typus). 4. Paramastax magna ((ig/lio-Tos). P. gaudenti similis; ab ea differt, pedibus anticis et inter- mediis rufescentibus, fronte unicolore fusca, alis magis eneis, femorum posticorum parte apicali sulcoque infero haud pur- pureis, lamina subgenitali plus elevata, angustiori. Femina mare multo major, colore pallidiori, elytris alisque in proportione brevioribus, valvulis ovipositoris gracilibus, elongatis. 7 Q. Long. corporis ern 6. mime 99 32 mm — pronoti 2 2,75 — elytrorum 10,75 11 — femorum posticorum = 13,5 16,5 Mastax magna Giglio-Tos, 1898. Boll. Mus. Tor. xm, n° 311, 38. Parria. Equateur, Santiago (Mus. Torino Gigl.-Tos). Mexico (Coll. Brunner, n° 10.035). Tres voisine de P. gaudens dont elle differe comme je Iai indiqué ci-dessus. De P. vicina m. elle différe par l’absence de pourpre aux cuisses postérieures, par les élytres moins fon- cés, et enfin, par les cerques bimucronés et la plaque sous- eénitale plus étroite. De P. /zta (Gerst.) elle différe tout-a-fait par la forme des cerques. 272 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (58) 5. Paramastax leta (Gerst.) Rufa, opaca. Caput nigrum; frons verticalis, macula citrina ornata; antenne rufescentes, segmentis duobus primis excep- tis sulfureis; oculi fusci. Pronotum antice et postice subrec- tum, dorso fusco-rufescens; lobi deflexi vitta nigra lata cine- rea in metapleura perducta ornati, angulo antico rotundato, postico rectangulo. Elytra et ale perfecte explicate; illa fusco- ferruginea, venulis fulvis; he lete croceze, venulis pallidiori- bus. Pedes rufescentes; femora postica nigro-carinata, apicem versus pallido-annulata, dehine infuscata, genubus nigris; tibiw tarsisque postici rufescentes, hirsuti, spinis nigris. Ab- domen gracile, testaceum. Lamina supraanalis medio spinulis conicis brevibus duobus armata. Cerci curvi, validi, fiexuosi, conici, testacei, apice infuscati. Lamina subgenitalis ampla, medio carinata, utrinque bidepressa, apice obtusa, leviter excisa. Long. corporis o 16mm. Q 18.5 mm. — pronoti 2 — elytrorum 12,5 13 — femorum posticorum 14 Mastaz leta Gerstecker, 1888. Mitth. Neuvorp. Rugen. xix & xx, 86. Patria. Fonteboa, Amazonas (Gerst.) Alto Amazonas (Coll. Bolivar). Cette espéce est trés voisine de P. personata (Bol.), dont elle différe par la couleur pale du corps, et par la forme des par- ties génitales. 6. Paramastax personata (/o/.) Caput nigrum; frons macula magna pallida ornata; oculi nigri. Pronotum antice sinuatum, postice in angulum per- obtusum productum, apice emarginatum, disco fusco, carina media subtili instructo; lobi deflexi superne vitta atra lata ornati, subtus pallidi, marginibus antico rotundato, inferiore obliquo, postico recto, angulo postico rotundato. Elytra per- fecte explicata, nigra, venulis ferrugineis; ale aurantiace, fusco-marginate , haud opace. Pedes nigri: tibiwe antice sub- (59) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 273 tus in parte apicali utrinque spinulosee. Femora postica fusco- ferruginea, nigro-carinata, apice atra. Tarsi atri. Abdomen pallidum, flavum, apicem versus infuscatum; segmentum anale magnum. Lamina supraanalis medio rotundato-excisa; lamina subgenitalis magna, apice carinata, margine postico triangulari. Cerci conici, validi, incurvi, infuscati, apice atri. o’. Long. corporis cf 19,5 mm. — pronoti 2,0 — elytrorum 15,5 — femorum posticorum 16 Mastax personata Bol. 1881. An. Soc. esp. x, 480.—Id. 1884. Viaje al Pacifico.—Gig.-Tos. 1898. Boll. Mus. Torino x1, n° 311, p- 38. Mastax imitatriz Gerst. 1888. Mitth. Nouvorp. Rugen. xix & xx, 85.—Karsch. 1889. Ent. Nach. xv, 36. Patria. Olivenca, Fonteboa, Iquitos, Amazones (Gerst. ) ?Perou (Coll. Brunner, n° 21.590). Alto Amazonas (Br. Coll. n° 14.162). Napo (Bol.), Santiago, Equateur (Mus. Torino). M. Giglio-Tos a établi cette synonymie, et de mon cote, je suis arrivé aux mémes résultats. Sans avoir examiné le type de Gerstaecker, j’ai reconnu un exemplaire, déterminé comme J/. imitatriz Gerst., comme identique au type de J. personata Bol., que, grace a M. Boli- var, j'ai pu examiner. La description de Gerstaecker ne laisse aucun doute qwil ne s’agisse dun exemplaire de M. perso- nata Bol. 19. Genus Masyntes Aarsch. Vertex valde convexus; fastigium inter oculos valde pro- ductum, apice bifidum emarginatum, vel rotundatum. Frons valde reclinata, costa frontali percurrente, latius sulcata, mar- gvinibus infra ocellum non elevatis inter oculos subcontiguis. Pedes graciles. Femora postica carinis dorsalibus vix serrula- tis vel inermibus. Tibize postice spinis marginis interni mag- nitudine alternantibus armate. Elytra et ale perfecte expli- cata, vel elytra rudimentaria, alis nullis. Masyntes Karsch. 1889. Ent. Nach. 31 & 26.—Br. 1893. Rev. Orth. 115. ANALES DE HIST. NAT. —XXVIII. 18 274 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (60) Mastax Scudder, Bol. nec Perty, de Haan, Stal. Typus generis Mastax Gundlachi Scudd. Dispositio specierum. 1. Elytra perfecte explicata, vel abbreviata, vel rudimentaria, abortiva, vix distinguenda. 2. Fastigium verticis apice emarginatum, bifidum. Pronotum carinis lateralibus obliquis instructum............... Biaiet nic wlalwrocatatete mclele ie ce Seteralete ner OL, | AELIDO LRClan DT gS 7ieIe a) 2.2. Fastigium verticis apice rotundatum. Pronotum carinis lateralibus nullis. 3. Pronotum postice truncatum, medio minute excisum..... wile “ajo tah eee 'cdeva e's] evailld) ca aiescihie oi tete patel eae fame EO PAL Te eee 3.3. Pronotum postice rotundatum, haud excisum........... Te Bebidas A A eR OOK ce SACP Een ow Shee tps 1.1. Elytra nulla. (Fastigium verticis rotundatum, haud emar- CoWbsh vb inh MPa aaa Aro MiRe ar TAPAS BRS ee ser 4S \ . >. Saurus n. 1. Masyntes Gundlachi (Scudder). Unicolor, testaceus. Fastigium verticis inter oculos valde productum, apice bifidum, emarginatum. Frons valde recli- nata, unicolor. Antenne brevissime, unicolores, testacez. Pro- notum antice et postice subrectum, dorso carina subtili ins- tructum; lobi deflexi longiores quam altiores, angulo antico rotundato, postico rectangulo, carinis lateralibus indistinctis, obliquis, antice descendentibus instructi, parte sub carinis sita triangulari, fusca. Pedes graciles. Tibie antice et inter- medize in parte apicali subtus utrinque spinulose. Femora omnia unicoloria, testacea, lobis genuum posticorum in spinas productis, genubus haud infuscatis. Tibiew testacee , apicem versus rufescentes; spine tibiarum posticarum infuscate. Ely- tra rudimentaria abortiva, minima, obtusa, vel perfecte expli- cata, quo casu, apice macula albida indistincta ornata. Ale null vel perfecte explicate. Abdomen unicolor. Valvule ovi- 70) | ositoris rect, crenulate. o Q. (61) Malcolm Burr.— kESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 275 Long. corporis 2 28 mm. — pronoti 3,9 — elytrorum:’ * Js 1-9 mm. 1,5-11 — femorum posticorum 17 — tibiarum posticarum 12 17 Mastax Gundlachi Scudder. 1874-75. Proc. Boston. Soc. Nat. Hist. xvi, 266.—Id. Ent. Notes tv, 1875, 20.—Bol. 1888. Enum. Ins. Orth. de Vile de Cuba. Mem. Soc. Zool. de France, 1888, 26. Masyntes Gundlachi WKarsch. 1889. Ent. Nach. xv, 31. Patria. Cuba (Scudd., Bol., Coll. Brunner, n° 7.315). Scudder n’a connu que des exemplaires aptéres, mais Boli- var a décrit les individus ailés, et ce derniere a indiqué que les exemplaires n’étaient pas des nymphes, d’apres la position et la forme des élytres qui ne sont pas celles propres aux nym- phes. Ila compare avec raison cette espéce a quelques unes du genre Podisma Latr. (Pezoteltiz Burm.), parce qwil peut se présenter des individus parfaitement ailés a coté d’autres a organes du vol rudimentaires et cependant adultes. 2. Masyntes Borellii Giglio-Tos. Supra fuscus, subtus flavo-olivaceus; capite fusco, fronte, cly- peo, labro flavicantibus; summa fronte, articulisque duobus basalibus antennarum sulphureis. Frons reclinata, costa fron- tali perducta sulcata. Antenne, exceptis articulis duobus basa- libus sulphureis, nigre, apice subclavate. Fastigium verticis ante oculos modice productum, cum fronte angulum acutum efficiens. Pronotum supra transversum, rotundatum, testaceo- fuscum, carinis lateralibus nullis, carina media subtili, flavi- da percurrente, margine postico truncato, medio minute inci- so; lobis deflexis nigris, longioribus quam altioribus, margine infero obliquo, angulo postico acuto, retrorsum modice pro- ducto, fascia flava infera lata in metapleuras perducta orna- tis. Elytra lobiformia, ellyptica, apice late rotundata, nigrican- tia, segmenti primi abdominis apicem vix attingentia. Ale elytris eque longee. Abdomen compresso-carinatum, irregula- riter flavo-maculatum, seemento sexto flavo, valvulis genita- libus testaceis. Pedes ochracei; femoribus posticis abdomine 276 ANALES DE HiSTORIA NATURAL. (62) longioribus, nigro-carinatis, annulo preeapicali geniculisque fuscis. Tibiwe postice spinis nigris, internis valde longioribus armate. Q. ei 8 Long. corporis Q 20 mm. — pronoti 3 — elytrorum 3,0 — femorum posticorum 15 Masyntes borelli Giglio-Tos. 1897. Boll. Mus. Torino, vol. xm, ioe Cae Be Masyntes mutilata Giglio-Tos. 1894. Boll. Mus. Torino, n° 184, 4. Zool. Jahrb. vu, p. 806. Parria. San Pedro, Paraguay (Giglio-Tos). Je ne connais cette espéce que par la description de M. Gi- glio-Tos. Elle parait étre voisine de M/. ZVigris m., dont elle différe par la forme du pronotum, tronqué en arriére, ot il est un peu échancré. ' 3. Masyntes Tigris sp. n. Ater. Vertex inter oculos productus, apice rotundatus, haud emarginatus, cum fronte angulo-contiguus. Frons reclinata ochracea, medio bicarinata. Antenne crassiuscule, atree, seg- mentis tribus primis exceptis sulphureis. Oculi globosi, mag- ni, brunnei. Pronotum antice subrectum, postice rotundatum, sinubus humeralibus perspicuis, dorso fusco-testaceum ; lobi deflexi fusci, longiores quam altiores, angulo antico rotundato, postico acutangulo, margine inferiore obliquo. Elytra et ale perfecte explicata; illa apicem abdominis haud attingentia, atra, conferte reticulata; hee valde infuscate , infumate. Pe- des graciles, ochracei, nigro-carinati, carinis vix serrulatis, apicem versus lete auriantiaci, annulo preapicali atro ornati; genubus atris. Tibize posticee infuscate, pubescentes, spinis nigris margine interno valde majoribus armate, pubescentes; tarsi pallidiores, pubescentes. Abdomen supra fuscum, subtus fulvum, segmentis dorsalibus tribus ultimis supra citrinis. Lamina supraanalis nigra, medio depressa, utrinque plus mi- nus sinuatim laminato-elevata. Cerci depressi, deplanati, latio- res, lanceolati. Lamina subgenitalis ampla, pubescens, valde (63) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 07 incurva, citrina, apicem versus carina transversa instructa, obtusa, margine postico (Superiore) sinuato, nigro. ¢. Long. corporis c? 20 mm. — pronoti 3 — elytrorum 9 — femorum posticorum 15 Patria. Paraguay (Bolivar). Il se distingue facilement de ses cong’énéres par sa couleur noire et orange vif, et par la forme curieuse des plaques gé- nitales. 4. Masyntes saurus sp. n. Fusco-testaceus. Vertex inter oculos in spatulam breviter productus. Frons ochracea vel ferruginea. Antenne nigre, segmentis 2 basalibus pallidis exceptis. Oculi fusci. Pronotum antice rectum, postice truncatum, medio levissime excisum, fusco-testaceum, media carinula instructum, per meso -et me- tanotum percurrenti; lobi deflexi longiores quam altiores, an- gulo antico valde rotundato, margine inferiore obliquo, mar- gine postico obliquo, recto, angulo postico acute producto. Pedes longi, graciles. Tibizwe antice subtus in parte apicali utrinque spinulose. Pedes antici et intermedii ochracei, fusco- variegati. Femora postica gracilia, testacea, necnon extus atro- ornata, genubus fuscis. Tibie postice fusce, spinulis nigris; tarsi rubrescentes vel fusci, pubescentes. Abdomen fuscum, medio carinatum. Cerci conici, recti, breves. Valvulze oviposi- toris longe, recte, serrulate. oJ 9. Long’. corporis of 20mm. 9 23 — pronoti 3 — femorum posticorum 14 16 Patria. Brazil. Bahia (Fruhstorfer. Coll. Brunner, n° 20.020 typus). Espirito Santo (Coll. Brunner, n° 20.112). 20. Genus Morsea Scudder. (In honorem Dom. A. P. Morse.) Masynti Karsch vicinum genus; differt capite plus appres- sum, vertice minus convexo, fastigio late convexo, nec sul- cato nec latere marginato, apice rotundato neque emargina- 278 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (64): to; carinis pronoti minus conspicuis, lobis deflexis angulo postico rectangulo, tibiarum posticarum spinis inter se eque longis, neque longitudine alternantibus. Morsea Scudder. 1898. Psyche. vi, n° 262, 179. 1. Morsea Californica Scudder. Cinerea, vertex vitta media nigra ornata; lobi deflexi pro- noti superne vitta horizontali nigra ornati, per abdominis latera percurrenti; pedes antici et intermedii ferruginei. ? Sexus. Long. corporis 9 mm. — femorum posticorum 9 Morsea californica Scudder. 1898. Psyche. vin, n° 262, 179. PatriA. California, Cahon Pass, et Mt. Wilson, Altadena, pres de Los Angeles, dans Juillet. Scudder a décrit cette espece tout réecemment, mais peut-étre les exemplaires typiques ne sont-ils pas adultes. THERICLEIS. Les Thericleis renferment les Humastacides africaines et ne sont représentées que dans la région éthiopienne. Elles sont caractérisées par le métatarse postérieur inerme, par les pat- tes moins gréles, et par les jambes antérieures désarmés. 21. Genus Penichrotes Xarsch. Gracilis, apterus. Vertex inter oculos utrinque carinatus; fastigium concavum, valde productum, apice bifidum. Frons valde reclinata, costa frontali percurrente, sulcata, infra ocel- lum paullo ampliata, marginibus non elevatis, inter ocellos subcontiguis. Pronotum dorso carinato, margine postico me- dio exciso, lobi deflexi longiores quam latiores, angulo antico rotundato, postico acutangulo. Pedes graciles, antici et inter- medii nec sulcati nec carinati, inermes. Femora postica cari- nis 3 superioribus denticulatis. Abdomen gracile, constrictum, medio carinatum. Cerci longi, graciles, incurvi. Typus generis Penichrotes nudata Karsch. (65) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 279 Penichrotes Karsch. 1889. Ent. Nach. xv, 32.— Brunner. 1893. Rev. Orth. 116: Ce genre se distingue par la forme du vertex, par l’absence des organes du vol et par le pronotum échancré au bord pos- térieur. 1. Penichrotes nudata Karsch. Voici la diagnose de M. Karsch: «Testacea, facie genisque flavis, his vitta longitudinali sub- obliqua fusca ornata. Antennarum articulis duobus basalibus elongatis flavis, reliquis flagellum formantibus nigris. 9. Long’. corporis Q 25 mm. — femorum posticorum 13,8 — ovipositoris 4» Penichrotes nudata Karsch. 1889, Ent. Nach. xv, 32. Penichrotes nudus Karsch. 1898. Stett. ent. Zeit. 1896, 247. Patria. Madagascar meridionalis centralis (Karsch). (Typus in Mus. Berol.) 2. Penichrotes leptotes Brancsih. «Fusca, facie pallidiore. Antennis articulo 1 inflato, testaceo, 2 angustiore, apice fusco incrassatoque, 3 cylindrico testaceo, ceteris fuscis, a 5 compressis, dilatatis; vertice medio lnea elevata, ab illa utrinque serie granulorum obsoletorum ins-— tructo, postice biarcuatim elevato-marginato. Pronoto rugu- loso, carina dorsali postice elevatiore; lobis lateralibus com- pressis, sulcis transversis obsoletis medio ac pone marginem posticum. Femoribus anticis ac mediis apice fuscis, maculis- que indistinctis conspersis: femoribus posticis obscurioribus genubus apicibus acutis. Tibiis posticis margine externo 27-29 spinulosis, margine interno 22 spinosis, spinis multo validio— ribus. oy. Long. corporis Of 2o30. Ins — pronoti 3,9 — femorum posticorum 15 — tibiarum posticarum 15» Penichrotes leptotes Brancsik. 1892. Jahrb. Naturw. Ver. Trenc- siner Comit. 186. Tab. xm, fig. 1, a-d & p. 256. 280 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (66) Patria. Madagascar, Ins. Nossibé. N’ayant pas vu cette espéce, je me borne & donner la des- eription de M. Branesik: 3. Penichrotes brevivalvatus Aqaisch. «Flavescente testaceus, subunicolor. Corpus glabrum. Caput valde exsertum, vertice pronoto «que longo, ascendente, pla- niusculo, inter oculos lato, apice bifido, in fastigium frontis acutangulariter contiguo. Frons valde reclinata, costa frontali ubique subeeque lata, inter antennas minime ampliata, sulco percurrente instructa. Pronotum tectitorme, lateribus margine postico sinuato, angulo postico producto. Femorum postico- rum carinz dorsales omnes apicem versus denticulate. Val- vule genitales breves, apice in dentem producte, curvatee, superiores superne, inferiores inferne denticulate; spine pe- dum posticorum apice, necnon denticuli valvularum genita- lium nigri. 9. Long. corporis Q 18,7 mm. — verticis 3 — pronoti 3 — femorum posticorum 12» Penichrotes brevivalvatus Karsch. 1896. Stett. Ent. Zeit. 246. ParriA. Africa orientalis, Kakoma (Karsch). (Typus in Mus. Berol.). D’apres M. Karsch, cette espece se distingue de P. nudata par les valves de l’oviscapte bien plus courtes. Chez cette es- pece, elles sont plus courtes que le pronotum. 4. Penichrotes Brunneri sp. n. Parvus, gracilis. Caput pallide-testaceum, horizontale, fronte horizontali, pallide testacea, vertice inter oculos productus, acutus; oculi prominuli supra fusci, subtus pallidi; antenne longiores, basi pallid, apicem versus infuscate. Pronotum rufum, linea longitudinali media viridi ornatum que per totum corpus usque ad partes genitales percurrit; lobi de- flexi vitta brevi longitudinali atra ornati, margine inferiori pallidi. Pronotum fere parallelum, antice rotundatum, postice (67) Malcolm Burr.-— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 281 truncatum , emarginatum , obsolete carinatum; lobi deflexi margine antico valde reclinato, margine inferiore recto, mar- gine postico reclinato, angulo postico acute producto. Metano- tum perspicuum, medio obsolete carinatum, margine postico recto, ut pronotum coloratum. Pectus brunneum. Pedes gra- ciles, viridi. Femora postica gracilia, sed incrassata, viridia, carinis superioribus denticulis minimis instructis, genubus infuscatis. Tibize postice spinulis margine externo minori- bus, margine interno magnitudine alternantibus armate, calcaribus terminalibus minimis, gre distinguendis. Meta- tarsus posticus inermis, hirsutus. Tarsi omnes apice infuscati. Abdomen gracile, dorso obsolete carinato, segmentum ulti- mum magnum; dorso rufo, ventre pallido, linea media viridi ornato; segmentis 3 ultimis testaceis, supra margine postico viridi-ornatis. Lamina supraanalis triangulariter profunde emarginata. Cerci longi, testacei, apice nigri, incurvi, decus- sati. Lamina subgenitalis magna, fornicata. ¢’. Long. corporis of 10mm. — pronoti 3 — femorum posticorum 9 Patria. Africa orientalis. (Coll. Brunner, n° 21.753. Typus.) C’est avec beaucoup de plaisir que je dédie cette espéce, si jolie, a M. Brunner de Wattenwyl, qui a bien voulu me com- muniquer un grand nombre des especes nouvelles des Humas- tacides de sa collection si importante, malgré la fragilité de ces insectes. 22. Genus Cymatopsygma Aarsch. Fastigium verticis acute productum. Costa frontalis angusta, tota sulcata. Pronotum paullo compressum, dorso medio, ca- rinatum, basi rotundatum. Elytra explicata, longa, femora postica superantia. Ale magne, Mastacidarum typice. Pedes eraciles, compressi, femoribus anticis margine inferiore in- terno mutico, posticis carina dorsali media grosse serrato-den- tata, interna et externa sublevibus. Tibiw postice curvate, superne sulcate et fere usque ad basin spinosee. Tarsorum segmentum primum superne sulcatum, leve. Cymatopsygma Karsch. 1896. Stett. Ent. Zeit. 247. Ce genre est tres voisin de Penichrotes Karsch, dont il differe 282 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (68) par les élytres et les ailes parfaits, et par le bord postérieur du pronotum pas échancré. Je ne le connais que par la descrip- tion et par le dessin de Karsch. Species unica. 1. Cymatopsygma flavelliferum Azarsch. Flavo-testaceum, fronte genisque infuscatis; fastigium ver- ticis marginibus callosis instructum. Costa frontalis sulco per- currente instructa, infra antennas parum dilatata. Pronotum ruguloso-punctatum, dorso carina media callosa instructum. Elytra angusta, dense et crasse reticulata. Alee subfiavicantes, margine externo anguste fusco-limbato, late, flabelliformes. Femora postica carina superomedia apice spinosa spinis longe distantibus novem validis armata. Tibize posticee superne in margine exteriore spinis 14 vel 15, in margine interiore spinis 13 vel 14 armate; spinis pedum posticorum apice necnon mar- ginibus denticulatis. Genitalia nigra. ©. Long’. corporis © 26,5 mm. — pronoti 5) — elytrorum 6,8 — femorum posticorum 15 Cymatopsygma flabelliferum WKarsch. 1896. Stett. Ent. Zeit. 247, Oto) ae Parria. Africa orientalis, Tanga, Magila, au commence- ment de Mai, 1893. (Karsch.) (Typus in Mus. Berol.) 23. GENUS Pseudothericles nov. gen. (Yebdoc, falsus, Thericles.) Aptera. Vertex inter oculos in fastigium triangulare valde productus, subtus compressus et bicarinatus. Frons reclinata. Pronotum antice et postice subrectum, tectiforme, medio cari- natum, carinis lateralibus nullis (1) instructum; lobi deflexi altiores quain latiores, antice rotundati, postice subsinuati. Klytra et alee nulla. Pedes graciles. Femora antica leviter sul- cata. Tibize anticee haud spinulosee. Femora postica tantum carina superiore serrulata, lobis genicularibus acuminatis. (1) Chez P. Bolivari m., on peut voir deux faibles carénes. (69) Malcolm Burr.— ESSAI SUR LES EUMASTACIDES. 283 Tibie posticee spinulis margine externo minoribus, interno majoribus armate. Metatarsus posticus inermis, hirsutus. Abdomen compressum, medio carinatum. Valvule oviposito- ris breves, serrulatee. Mas incognitus. Ce nouveau genre se distingue du Zhericles par la forme du vertex. Typus generis Zhericles compressifrons Stal. Dispositio specierum. 1. Femora postica haud compressa. 1. compressifrons (S77/. ) 1.1. Femora postica valde compressa. 2. Statura minore; gen macula post-oculari pallida ornate; lobi deflexi pronoti angulo postico acuto; femora postica SEMUDUS INTUSCATIS.. Jancis sare tee +s ee <1e) DOLLVEI Tk. 2.2. Statura majore; gene macula post-oculari nigra; lobi de- flexi pronoti angulo postico rotundato; femora postica cvenubus utrinque vitta atra nitidissima ornatis........ b Agger n ped Abt e! WAepes ewe ssc rams yaiers tamicl ce HUES , v. Madrid, 1854, paginas 259-278, con dos grabados en el texto. Ojeada sobre la geologia del reino de Valencia. Madrid, 1854, 15 paginas en 4.° y 2 laminas. Antes se habia publicado en la «Revista Minera», v. Madrid, 1854, paginas 562-573 y 675-676, con 2 ldminas. (1.2 Vistas y cortes geoldgicos; 2.4 Mapa geoldgico, en bosquejo, -de la regién.) Descripcién geoldgica-minera de las provincias de Murcia y Albacete. Madrid, 1868, xxtv-186 paginas en gran folio, con 56 grabados en el texto yy 22 laminas. (1.* Mapa geoldgico de las provincias de Murcia y Albacete; 2.8 Mapa geoldgico-topografico de ios alrededores de Murcia; 3.2 Cortes geoldégicos; 4.4 Mapa de los sistemas de levantamiento de las montafas en Espana y Portugal; 5.4 Mapa de las zonas metaliferas antigua y moderna, y de los ejes de erupcién y levantamiento; 6.2 Mapa topografico y geologico de la sierra de Cartagena; 7.2 y 8.* Cortes geoldgicos de la sierra de Carta- gena; 9.2 Plano topografico y geoldgico de los cerros Negro, San Cristobal y de los Pernales, en Mazarron; 10. Plano topografico y geologico de San Juan de Riopar, y 11. Peces fésiles encontrados en la Serrata de Lorca. El resto de las laminas pertenece exclusivamente 4 asuntos relativos 4 la industria minera.) Nota sobre las emanaciones volcdnicas y metaliferas descritas por M. Elie de Beaumont. «Revista Minera», xx. Madrid, 1869, paginas 257-277, 289-304, 321-339, 360-369, 397-409, 457-464, 489-495 y 537-552, con 1 l4mina aparte. 360 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (10). Nota acerca de movimientos lentos y progresivos de la corteza terrestre observados en Espanta y de los caracteres orogrdficos de la Sierra Bética, distinta de las Maridnica y Penibetica. AN. DE La Soc. esp. DE Hisr. nav. Actas, uu. Madrid, 1873, paginas 27-29. Capas de Azufre de Hellin. AN. DE LA Soc. esp. pe Hist, nav. Actas, 11. Madrid, 1873, pag. 44. La ciudad encantada. Hoces, salegas y torcas de la provincia de Cuenca. AN. DE LA Soc. esp. Dk Hist, nav. Memorias, iv. Madrid, 1875, paginas 233-239 y 5 laminas aparte. Espana y sus antiguos mares. «Boletin ce la Sociedad Geografica de Madrid», 11. Madrid, 1877, pagi- nas 143.166, 211-229, 277-314, 461-498; 7 laminas aparte que representan los mares silurianos, carboniferos, tridsicos, cretaceos, numuliticos, mio— cenos y pliocenos, en escala de 1: 4.000.000; xv1. Madrid, 1884, paginas 216- 231; xvi. Madrid, 1884, paginas 129-169; xx1. Madrid, 1886, paginas 37-113. Erupcion dioritica del cerro de Oriolé y de la sierra de Orihuela. An. DE LA Soc. esp. pE Hist. nav. Actas, vy. Madrid, 1876, paginas 74-75. Observaciones acerca del numulitico del reino de Valencia. AN. DE LA Soc. esp. DE Hist. nat. Actas, v1. Madrid, 1877, paginas 73-74. Mapa geologico de Espana y Portugal, en escala de 1 : 2.000.000. Madrid, 1879. Una hoja. Excursion geologica en la parte SO. de la provincia de Almeria y sierras inmediatas pertenecientes a la de Granada. AN. DE LA Soc. esp. DE Hisv. Nav. Actas, yu. Madrid, 1879, paginas 52-57. Inundaciones y sequias. «Bol. de la Soc. Geogr. de Madrid», x. Madrid, 1881, paginas 81-98, con 6 laminas aparte. Observaciones acerca de la caliza de Sierra de Gaddor, provincia de Almeria. AN. DE LA Sov. esp. pe Hisr. nar. Actas, x1, Madrid, 1882, paginas 39-40. De como nuestro suelo no es tan pobre como se quiere decir. «Bol. de la Soc. Geogr. de Madrid», xr. Madrid, 1882, paginas 280-292. Resena fisica y geologica de la region SO. de la provincia de Almeria, «Bol. de la Com. del Mapa geol. de Espafia», 1x. Madrid, 1882, pagi- nas 227-318, con 47 grabados en el texto y 1 lamina. (Mapa geoldgico é ipsométrico, en bosquejo, de la regién suroeste de la provincia de Alme- ria, en escala de 1 : 300.000.) Pruebas geologicas de la existencia de la Atlantida; su fauna y su flora. Congreso internacional de americanistas. Actas de la cuarta reunion en Madrid, 1881. 1. Madrid, 1883, paginas 142-165. Las desigualdades de la corteza terrestre y leyes que parecen regirlas, con respecto particularmente a la orografia de la Peninsula ibérica. (Discurso- pronunciado en el acto de su recepcién en la Real Academia de Ciencias » Exactas, Fisicas y Naturales de Madrid, el 29 de Junio de 1884.) (11) Puig y Larraz.—NOTICIA NECROLOGICA. 361 ' Madrid, 1884. 70 paginas en 4.°, con un cuadro sindptico de la extension y direccion de los principales accidentes orograficos de la Peninsula y 2 laminas. (1.8 Esquema de la constitucién orografica de la Peninsula hes— périca; 2." Mapa de los sistemas de levantamiento de las montafias de Es- pana y Portugal, ejecutado sobre la triangulacién geodésica.) Nota sobre la alimentacion y desaparicion de las grandes lagunas penin- sulares. An. DE LA Soc. esp. pe Hist. nav. Actas, x11. Madrid, 1884, paginas 79-80. Los terremotos de Malaga y Granada. «Bol. de la Soc. Geogr. de Madrid», xvi. Madrid, 1885, paginas 65-90 y 1 lamina. (Esquema de la constitucién orografica de la Peninsula hes— périca.) Nota sobre la alimentacién y desaparicion de los lagos terciarios peninsu- lares. AN. DE La Soc. esp. DE Hisr. nav. Actas, xiv. Madrid, 1885, paginas 27-37. Espania.— Geografia morfologica y etiolégica.— Observaciones acerca de la constitucion orografica de la Peninsula y leyes de direccion de sus tierras, cordilleras, costas y rios principales. Madrid, 1886. vi, 129 paginas en 4.° Mapa hipsométrico de Espana y Portugal, en relieve, escala horizontal de 1: 200.000. (El ejemplar tipo fué terminado en 1888 y dado 4 conocer en el Ateneo de Madrid con motivo de una conferencia. La matriz en co- bre que ha servido para hacer los ejemplares que 4 fines del ano 1899 se han puesto 4 la venta, fué ejecutado en la Escuela central de Artes y Oficios 4 principios de este ultimo afio, bajo la direccién de D. Ramiro Suarez y de nuestro consocio el Sr. Rodriguez Mourelo.) Monografia de las aguas minerales y termales de Espafia. Madrid, 1882. Un volumen de x-145 paginas en folio marguilla y 2 lami-" nas. (1.2 Vista de las termas y banos de San Roque en Alhama de Aragon; 2.2 Mapa de las aguas minerales de Espafia y Portugal, en escala de 1: 2.000.000.) Orografia de la Peninsula ibérica y relieve hatimétrico de los mares que la rodean (Noticia acerca de una memoria referente 4 la). AN. DE LA Soc. esp. DE Hist. nat. Actas. 2.2 serie v (xxv). Madrid, 1896, pag. 121. brace, 2 "ya io ee SS | yee Pete ye Gtr: sah: : af ae ihe ad tie sibs fae tae Wat Shorea “Hu A BR ERC iy ee eg Dye en oe ve if on " ee Le he rise: Cxat : tae eS ab ms . 4 : oe 3 Rete: is Sp. sees a cs ee Z. ia Sis Rieter Sch ipices aN any nleee Ld Mt ata he cae ey WEE vate Wy, AEA % Pee ie Wi ee ee tee aay id aes SS ' pi Aad iu OAS tote Rha eh bake ith * fe Seren Wea age ES WORN yobs a . pet xs pened Bus & pee - sa) PRES irs ot hs sai Sa Mapa Pees roe sy 5b Ste matt ‘ i of, yo a ek nk AD ES PsihpaNtiig epatey rape ait 04 Deter Ole Seen get ta son wa om Sires pea e: dian: pee Se SG ish Mee y is ee. be ae oe EXAMEN DEL GRUPO BATHYSCIA DE ESPANA, POR DON MANUEL MARTINEZ DE LA ESCALERA. (Sesion del 5 de Enero de 1898.) Quizas es prematuro el presente trabajo por estar aun in- exploradas las grutas de regiones enteras de nuestra Penin- sula; no me propongo en é! otro objeto que marcar con un jalon el momento actual en un grupo que sera muy dificul- toso pasado algun tiempo, tan rica es la fauna cavernicola y tan afines sus especies. He tenido presente al redactar esta Memoria los materiales mas completos que puedan desearse para labor semejante. Desde el verano de 1889 en que comencé a explorar las grutas de Vizcaya, he cazado personalmente todas las especies des- critas hasta hoy, con excepcion del Spele@ochlamys Hhlersi y las Bathyscia fugitiva y Crotchi, que no pude encontrar en las gru- tas de Aleoy, Montserrat y Alsasua, respectivamente. Estas es: pecies he podido estudiarlas gracias al Dr. Dieck que me ha enviado el unico tipo 2 que conserva del Spel@ochlamys y & la comunicacion por el Dr. Heyden del tipo -7 de Bathyscia fugi- livd que sirvid 4 Reitter para crear la especie. Mi amigo y maes- tro, el Sr. Uhagon, me ha facilitado su ejemplar de B. Crotchi, que es tipo por haberse hallado con el que sirvié 4 Sharp para describir la Q y haber sobre é] dado el Sr. Uhagin los caracteres del o que no tuvo presentes el Sr. Sharp al crear la especie; tanto la 9 de Sharp como el .7 de Uhagén fueron encontrados por los Sres. Crotch y Uhagoén en la gruta de Orobe, cerca de Alsasua. He visto asimismo en la coleccién del Sr. Uhagén los tipos A64 ANALES DE HISTORIA NATURAL (2) de sus especies, conformes en un todo a los ejemplares caza— dos por mien las mismas grutas donde se encontraron, 6 en otras proximas. En las Bestimmungs Tabellen, de Reitter, aparecen 17 espe- cies de Bathyscig de Espana: hago yo subir su numero a 21, describiendo tres nuevas y devolviendo a £&. vasconica su cate- goria de especie; Reitter la reune equivocadamente a B. Cisne- vosi; son, sin embargo, especies perfectamente distintas, ad- virtiendo de paso que, tanto en una como en otra, los tarsos anteriores de la OQ estan compuestos de cuatro artejos sencillos, caracter comuin a todas las especies del género Bathyscia y tan fundamental que si en alguna especie las 9 © tuvieran 5 arte- jos en los tarsos anteriores, bastaria tal particularidad para fundamentar en ella un nuevo genero con tanta 6 mayor ra- zon que el creado para Adelops Kiesseniwetteri. CARACTERES DEL GRUPO «BATHYSCIA». Cuerpo oval, mas 6 menos prolongado 6 convexo, brillante, pubescente y con los élitros finamente punteados; color rojizo. Cabeza inclinada, sin ojos: antenas largas, de 11 artejos y la maza de 5, y poco aparente. Protorax transverso, mas ancho en la base que hacia delante y con los angulos posteriores mas 6 menos agudos y abrazando 6 no las espaldas: con una excavacion en la parte inferior del protorax para recibir las patas anteriores. Caderas posteriores transversas y separadas. GENEROS QUE COMPRENDE. Gun. Speleeochlamys Diech. Protérax con su mayor anchura hacia la base y ésta mas es- trecha que la base de los élitros. Sus A4ngulos posteriores muy prolongados hacia atras, muy agudos y levantados, sin abra- zar la base de los élitros. Klitros sin arrugas transversas, prolongados en punta muy pronunciada en su terminacidén. Antenas mas cortas que el cuerpo. Cuerpo rechoncho. Este género establece la transicién a los Pholeuonide. F ‘ ‘ <3) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCLE>». 363 GEN. Perrinia Rei//. Protorax con su mayor anchura hacia el medio y con la base tan ancha como la base de los élitros; sus angulos posteriores casi agudos, no declives y poco prolongados hacia atras, sin abrazar la base de los élitros. Klitros con arrugas transversas y redondeados en el apice. Antenas casi tan largas como el cuerpo. Cuerpo alargado. GEN. Bathyscia Schiidte. Protérax con su mayor anchura hacia la base 6 cerca de ella y con los angulos posteriores mas 6 menos agudos y pro- longados hacia atras, pero declives, y abrazando la base de los élitros. Elitros con 6 sin arrugas transversas, mas 6 menos redon- deados en el apice pero no terminados en punta pronunciada. Antenas mas 6 menos largas, sin alcanzar la longitud del cuerpo. Cuerpo mas 6 menos rechoncho 6 alargado. DESCRIPCION DE LAS ESPECIES. GEN. Speleeochlamys eck. S. Bhlersi Dieck.—Long. 2 mm. DiaGNosis. Elitros sin estrias transversas; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° muy poco mas largos que anchos, el 8.° mitad mas corto que el 7.° y un tercio mas corto que el 9.°, el 7.° apenas mas largo que el anterior. Cuerpo oval igualmente estrechado hacia atras que hacia adelante y bastante convexo. Antenas moderadamente largas, pasando apenas de la mitad del cuerpo y con la maza bien marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto, 2.°, mas largo y tan grueso como el anterior. 366 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (4) 3.°, casi una mitad mis corto y mas fino que el anterior, bastante mas de dos veces tan largo como ancho. 4.°,5.° y 6.°, proximamente iguales, casi una mitad mas cor- tos que el anterior, de su mismo grueso y apenas engruesados en el apice, dos veces tan largos como anchos. 7.°, apenas mas largo que los anteriores pero mucho mas erueso y muy engruesado de la base al Apice, vez y media tan largo como ancho. 8.°, mitad mas corto y fino que el anterior, casi globular, apenas mas largo que ancho. 9.° y 10.°, iguales, un tercio mas largos que el anterior, poco mas largos que anchos y del grueso y forma que el 7.° 11.° mayor que los anteriores, acuminado en el apice, dos veces tan largo como ancho. Protérax apenas dos veces tan largo como ancho, con su mayor anchura en la base, que es bisinuosa, con los angulos posteriores agudos y levantados, mas estrecho que la base de los élitros, lentamente estrechado en curva hacia adelante, bastante velloso y regularmente convexo. Elitros dos veces tan largos como anchos, bastante convexos, con su mayor anchura hacia el medio y después brevemente estrechados hasta su conclusién en punta aguda muy pronun- ciada, pasando bastante del pigidio, ligeramente deprimidos en la sutura y con reborde marginal, fuertemente punteados en toda su superficie pero sin estria sutural ni arrugas trans- versas; con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. atas finas y largas, tibias anteriores encorvadas hacia afuera, intermedias hacia adentro y sin mas espinas que las terminales, lo mismo que las posteriores que son rectas. © Tarsos largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, los in- termedios y posteriores de 5. Sobre un ejemplar 9 de Dieck de la gruta de San Elias en Alcoy, proveniente de las cazas de Ehlers, en la provincia de Alicante. Grn. Perrinia Rii7. P. Kiesenweltevi Dieck. Long. 2,75 mm. DiaGNosis. Llitros con estrias transversas; antenas muy largas, pasando mucho de la mitad del cuerpo y con los arte-: jos &.°, 9.° y 10.° muchisimo mas de dos veces tan largos como (5) Escalera.— EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCLE». 367 anchos, el 8.° un tercio mas corto que el anterior y tan largo como el 9.°, el 7.° apenas tan largo como el anterior; los 3.°, 4.° y 5.° los mas largos de todos. Cuerpo oval alargado, poco mas estrechado hacia atras que hacia adelante y regularmente convexo. Antenas muy largas, pasando con mucho de la mitad del cuerpo y con la maza poco aparente. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, mas largo y mas fino que el anterior. 3.°, 4.° y 5.°, proximamente iguales, algo mas largos y finos que el anterior, apenas engruesados en el apice y muchisimo mas de dos veces tan largos como anchos. 6.°, casi un tercio mas corto que los anteriores y de su mis- ma forma y grosor. 7.., apenas tan largo como el anterior y fuertemente en- gruesado desde su mitad al apice donde es bastante mas @rue- so que el. &.°, un tercio mas corto que el anterior, cilindrico, muchisi- mo mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, tan largo como el anterior y engruesado desde la base al apice. 10.°, apenas un tercio mas corto que el anterior, tan grueso como él y engruesado desde la base al apice. 11.°, un tercio mas largo que el anterior, apenas mas grueso que él y fuertemente acuminado. Protorax apenas dos veces tan ancho como largo, con su ma- yor anchura hacia el medio, brevemente estrechado en curva hacia adelante, poco hacia la base, que es bisinuosa, con los angulos posteriores poco agudos y planos sin abrazar la base de los élitros, bastante velloso y regularmente convexo. Elitros tan anchos en la base como la base del protérax, mas de dos veces tan largos como anchos, regularmente convexos, tan anchos en la base como la base del protérax, con su ma- yor anchura a un tercio de la misma y muy lentamente estre- chados después hasta su conclusién, donde se redondean se- paradamente; sin depresién en la sutura ni estria sutural, fuertemente punteados en toda su superficie y con arrugas transversas. Patas finas y largas, tibias anteriores encorvadas hacia 368 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (6) afuera, intermedias hacia adentro y bastante espinosas, pos- teriores rectas y menos espinosas. © Tarsos largos; los anteriores de 4 artejos sencillos, inter- medios y posteriores de 5. <7 Cinco artejos en todos los tarsos: los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados, el 1.° mas estrecho que el fin de la tibia y dos veces tan largo como ancho; el 2.° mas estrecho que el anterior, un tercio mas corto que él y casi dos veces tan largo como ancho; el 3.° mas estrecho que el anterior y un tercio mas corto que él, resultando el 1.° mas corto que los dos siguientes reunidos y la pala larga y estrecha. Sobre cuatro ejemplares de la gruta de Colbato, en Montse- rrat, en Junio de 1892. EN. Bathyscia Schiddte. CARACTERES DE LAS SECCIONES. a \Klitros sin arrugas transversas. Antenas con el artejo 8.° mas largo que ancho; los 8&.°, 9.° y 10.° mucho mas de dos veces tan largos como ATIC ORY oi ahaa Lege foimeghy bre ithe yeh ae Seccion A. Artejos 8.°,.9.°' y 10.” aaa 6 apenas dos veces tan largos Gomo anchos: faces .ke eo niiap Ege g aM SEES Seccion B. Antenas con el artejo 8 transverso......... .. Seccion C. aa Wiitros estriados transversalmente. Antenas con el artejo 8.° mas largo que ancho. Seccion D. Antenas con el artejo &.° transverso. < psc? MOCEION Si; Cuadro para la determinacion de las especies. 1. (24) Especies con los élitros no estriados al través. 2. (23) Antenas con el artejo 8 mas largo que ancho. Cuerpo ovalado y antenas tanto 6 mas largas que la mitad del cuerpo. . (10) Antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° mucho mas de dos veces tan largos como anchos.—Seccion A. 4. (5) Antenas con el ultimo artejo mas de dos veces tan largo como el anterior: primer artejo de los tarsos anteriores en el oc’ mas ancho que la tibia en su extremo....... nies s clei’ ls v0 vine doy ANCERE SCHAMIL. +4 “~ (7) 6. 1 os 10. Escalera.— EXAMEN DEL GRUPO «“BATHYSCL®>». 369 (4) Antenas con el ultimo artejo apenas dos veces tan lar- go como el anterior. (7) Primer artejo de los tarsos anteriores en el ~~ mucho mas ancho ue la tibia en su extremo. Antenas con elartejo.8;> tan’ largo comovel 97.4.4): =.) ‘abies’ retards SEE 2A RE 8 ag Sharp. (6) Primer ria de los tarsos anteriores en el & apenas tan ancho como la tibia en su extremo. Antenas con el artejo 8.° mas corto que el 9.° (9) Cuerpo en dvalo corto, muy convexo. Elitros escasa- mente dos veces tan largos como anchos. Antenas con los artejos 9.° y 10.° mucho mas estrechos en la base que én el apice, el 9.° un tercio7mas corto CMCC Le Dre coat atest. Sages sie ei ares Ld. PLLCCONIIS = Wee", (8) Cuerpo en dvalo alargado, regularmente convexo. Eli- tros mas de dos veces tan largos como anchos. An- tenas con los artejos 9.° y 10.° poco mas estrechos en la base que en el apice, el 9.° tan largo como Cl Bie psmtert a.etsce ote Socasisectce™ --+- B. Seeboldi Uhag. (3) Antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° nada 6 apenas dos veces tan largos como anchos.—Seccion B. . (16) Primer artejo de los tarsos anteriores en el % mas ancho que la tibia en su extremo. . (15) Antenas con el artejo &.° tan largo como el 9.° y a lo sumo un tercio mas corto que el 7.° y éste no mas largo que el 6.° 13. (14) Cuerpo en ovalo corto, regularmente convexo. Elitros 14, escasamente dos veces tan largos como anchos. An- tenas con el artejo &.° muy poco mas corto que el 7.” Primer artejo de los tarsos anteriores en el o& poco mas ancho que la tibia en su extremo y casi tan largo como los tres siguientes reunidos; la pala re- gularmente alargada..... B. flaviobrigensis Uhag. (13) Cuerpo en évalo corto, muy convexo. Elitros vez y me- dia tan largos como anchos. Antenas con el artejo 8.° un tercio mas corto que el 7.° Primer artejo de los tarsos anteriores en el o mucho mas ancho que la tibia en su extremo y notablemente mas corto que los tres siguientes reunidos; la pala rechoncha y COW eO is ie dod Oo ais fos aye se DP SLOIDY Sp. NOV. ANALES DE HIST, NAT.— XXVIil. 24 370 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (8) 15. (12) Antenas con el artejo 8.° ligeramente mas corto que el 9.° y casi una mitad mas corto que el 7.° y éste casi un tercio mas largo que el 6.° Cuerpo en évalo corto, muy convexo. Elitros vez y media tan largos como anchos. Primer artejo de los tarsos anteriores en el o mucho mas ancho que la tibia en su extre- mo, y tan largo comoilos tres siguientes reunidos; la pala alargada.............. B. cantabrica Uhag. 16. (11) Primer artejo de los tarsos anteriores en el o& a lo sumo tan ancho como la tibia en su extremo. 17. (20) Primer artejo de los tarsos anteriores en el o” tan an- cho como la tibia en su extremo. 18. (19) Cuerpo en dvalo corto, poco mas estrechado hacia atras que hacia adelante, regularmente convexo. Elitros escasamente dos veces tan largos como an- chos. Antenas con el artejo 8.° apenas un tercio mas corto que el 7.°, y éste poco mas de dos veces tan largo como ancho y tan largo como el 9.° Primer artejo de los tarsos anteriores en el co” notablemen- te mas corto que los dos siguientes reunidos y la palavcortac:; 4.2.1 weg ele sce. wasconicd La Bria. 19. (18) Cuerpo en évalo no muy corto, bastante mas estre- chado hacia atras que hacia adelante, regularmente convexo. Elitros dos veces tan largos como anchos. Antenas con elartejo 8.° mitad mas corto que el 7.°, y éste bastante mas de dos veces tan largo como ancho y bastante mas largo que el 9.° Primer ar- tejo de los tarsos anteriores en el ~ mas largo que los dos siguientes reunidos y la pala muy alarga- Gy Sats shiloh cree platens csrels oo. De CISnenosy PETA. 20. (17) Primer artejo de los tarsos anteriores en el co mas es- trecho que la tibia en su extremo. 21, (22) Cuerpo en évalo alargado, muy notablemente mas es- trechado hacia atras que hacia adelante y bastante convexo. Antenas con los artejos &.°, 9.° y 10.° casi dos veces tan largos como anchos, el 10.° un tercio mas corto que el 9.° y el 11.° doble de largo que et 100.0330 o eee eee B. autumnalis sp. nov. 22. (21) Cuerpo en ovalo alargado, poco mas estrechado hacia atras que hacia adelante y regularmente convexo. ——— (9) 23. 30. Jl. (2) (29) (28) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO “BATHYSCLE>». 371 Antenas con los artejos &.°, 9.° y 10.° poco mas lar- gos que anchos, el 10.° tan largo como el 9.’ y el 11.° bastante mas del doble de largo que el 10.°.. a ee See Wee a eeen ceoteet sD. Pens Sharp. Antenas con el artejo 8.° tan largo como ancho. Cuerpo globular, sumamente convexo y antenas no alcan- zando a la mitad del cuerpo. Elitros poco mas lar- gos que anchos. Primer artejo de los tarsos ante- riores en el o mas estrecho que la tibia en su ex- tremo.—Seccion C. ..... 4.5. od feeloues Dre CTODICH AND: Especies con los élitros estriados transversalmente. Antenas con el artejo 8.° mas largo que ancho.— Sec- cidn D. Primer artejo de los tarsos anteriores en elo mas ancho que la tibia en su extremo y mas largo que los dos siguientes reunidos; la pala alargada...... Fer Sesh rota wae heel abn och di steeise anc, ONOLCHU OULD: Primer artejo de los tarsos anteriores en el ~ tan ancho como la tibia en su extremo. Antenas con el artejo 8.” mas corto que el 7.° Cuerpo pequeno, poco estrechado posteriormente. An- tenas con el artejo 8.°, mitad mas corto que los 7.” y 9.° y apenas dos veces tan largo como ancho, ar- tejo 5.° como los 3.” y 4.° y ligeramente mas largo que el 6.° y de su misma forma y grosor. Primer ar- tejo de los tarsos anteriores en el ~ notablemente mas corto que los dos siguientes reunidos y la pala CODA arc. Sea eae oid. a4 .. B. Mazarredoi Uhag. Cuerpo grande, muy estrechado posteriormente. An- tenas con el artejo 8.° un tercio mas corto que el 7.°: de la misma longitud que el 9.° y bastante mas de dos veces tan largo como ancho; artejo 5.° proxima- mente tan largo como aquellos entre quienes esta y de su misma forma y grosor. B. Bolivari sp. nov. Antenas con el artejo 8.° tan largo como el 7.° Cuerpo mediano, poco estrechado posteriormente. Antenas con el artejo 8.° tan largo como los 7.° v 9.° y mas de dos veces tan largo como ancho, artejo 5.° el mayor de todos, un tercio mas largo que aquellos entre quienes esta, mas grueso que ellos y engruesado 372 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (10) en su parte media mas que en la base y en el apice. See: wis. ss Bm eS |) oie oc alclae np Me PUGTLIUD AR LUR. 32. (25) Antenas con el artejo 8.° transverso.—Seccion F. 33. (34) Hlitros con estria sutural y apenas estriados transver- salmente. Primer artejo de los tarsos anteriores en el po mas estrecho que la tibia en su extremo. An- tenas con el artejo 11.° casi dos veces tan largo como el 10.° y muy acuminado, los 9.° y 10.° tan largos como anchos, mas cortos que el 7.° y notablemente mas anchos que él, el 7.° dos veces tan largo como anGhOlas-ei sleets denle wie c ses a yh. CONCH SCNatuit, 34. (33) Hlitros sin estria sutural y fuertemente estriados al través. 35. (36) Cuerpo grande. Primer artejo de los tarsos anteriores en el co apenas mas estrecho que la tibia en su ex- tremo. Antenas con el artejo 11.” vez y media tan largo como el 10.° y muy acuminado, los 9.° y 10.° tan largos como anchos, mas cortos que el 7.° y tan anchos como él, el 7.° vez y media tan largo como AMIGINO ns erin ts.s a Staete tte ee ete B. rugosa Sharp. 36, (85) Cuerpo pequeno. Primer artejo de los tarsos anterio- res en el o& mas estrecho que la tibia en su extre- mo. Antenas con el 11.° poco mas largo que el 10.° y poco acuminado, los 9.° y 10.° tan largos como an- chos, tan largos como el 7.° y mucho mas gruesos que él, el 7.° apenas vez y media tan largo como AMIGO alah sek tole SFU Sloe sae ay De LAG ONE Snaps He adoptado en los cuadros anteriores el plan generalmente seguido para la distincién de las especies en el gén. Bathyscia. La proporcién del artejo 8.° con relacién 4 los otros es un caracter diferencial de primer orden que, combinado con los basados en la mayor 6 menor dilatacién de los tarsos anterio- res en los oc’, hacen facil la distincién de las especies den- tro de los grupos. Y creo util hacer aqui algunas advertencias. Incluyo B. Crotchi en el grupo aa porque aun cuando poco visibles, tiene arrugas transversas, tanto como B. Mazarredoi, con la cual tiene grande afinidad; por lo demas, en algunos ejemplares de especies incluidas en el grupo @ se observan (1l) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCLE>. 373 tendencias en la punctuacién 4 formar estrias transversas cerca de los humeros 6 en la parte media de los élitros sin que por ello pueda decirse que tienen arrugas transversas. B. tropica cae dentro del grugo @ por no tener arrugas transversas: y es verdaderamente especie cavernicola aun te- niendo el artejo 8.° tan ancho como largo; también B. Perez tiene dicho artejo escasamente mas largo que ancho y esta perfectamente en el grupo en que forma: B. tropica es una forma especial, la mas meridional hasta ahora de las espafio- las y que en su aspecto recuerda a la especie italiana B. l- gurica. Salvo, pues, estas especies que tienen caracteres comunes a los dos grupos y a las que, por tanto, es arbitrario encerrar dentro del uno 6 del otro, las demas especies, mas homogé- neas, entran sin dificultad en una i otra de las divisiones a que pertenecen. Las dimensiones de los artejos estan tomadas sobre su parte mas ancha; conviene advertirlo asi. En caso de dudas, cuando en una especie se repite la pro- porciodn de unos artejos antenales con sus adyacentes, de la que guardan los mismos artejos en otra especie afin, la rela- cidn de los artejos de los tarsos en los oo” hace la separacion facil. Porejemplo, B. B. Crotchi y Mazarredoi tienen sus artejos antenales en la misma proporcién de unos a otros, y tanto que las descripciones parecen calcadas; pues bien, el primer artejo de los tarsos anteriores en el ¢' de B. Crotchi es mas largo que los dos siguientes reunidos, mientras que en B. Mazarredoi dicho artejo es notablemente mas corto que ellos; claro es que comparando la una con la otra, saltan a4 la vista las diferen- cias, no dejando dudas sobre su distincidn especifica, pero to- madas individualmente una Uv otra sin ese caracter son im- posibles de separar: y lo mismo ocurre con otras especies. CARACTERES DE LAS ESPECIES. Seccion A. B. arcana Schauff.—Long. 2,5 mm. DiaGNnosis.—Elitros sin estrias transversas; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° mucho mas de dos veces tan largos como anchos, el 8.° apenas mas corto que el 9.° y una mitad que el 374 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (12) 7." y éste no mas largo que el 6.°; el 11.° el mayor de la maza, tan largo como los dos anteriores reunidos; tarsos anteriores del o’ mas anchos que el fin de la tibia, con su primer artejo poco mas corto que los tres siguientes reunidos y la pala alargada. Suerpo en dvalo alargado, igualmente estrechado hacia atras que hacia adelante y bastante convexo, color rojizo. Antenas muy largas, pasando de la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, mas largo y mas fino que el anterior. 3.° y 4.°, proximamente iguales, un tercio mas cortos que el anterior y mucho mas finos que él, cilindricos y mucho mas de dos veces tan largos como anchos. 5.° y 6.°, préximamente iguales, un tercio mas largos que los anteriores y apenas engruesados en el apice. 7.°, tan largo como el anterior, ligero y normalmente en- eruesado de la base al apice donde es algo mas grueso que ellos. 8.°, mitad de largo que el anterior, del grueso del 6.°, cilin- drico y mucho mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, muy ligeramente mas largo que el anterior, un tercio mas corto que el 7.° y como él engruesado de la base al apice. 10.°, proximamente de la misma longitud, forma y grueso que el anterior. 11.°, el mayor de todos, tan largo como los dos anteriores reunidos, fuertemente acuminado y como estrangulado en su parte media. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- chura en la base, que es bisinuosa, con los 4ngulos posterio- res awudos abarcando escasamente la base de los élitros, estre- chando lentamente hacia adelante en curva, bastante velloso y regularmente convexo. j Klitros mas de dos veces tan largos como unchos, bastante convexos, con su mayor anchura en la base, paralelos hasta su mitad, después estrechados lentamente hasta su conclusién donde se redondean separadamente, resultando poco acumi- nados, sin depresién en la sutura ni estria sutural, regular- mente punteados en toda su superficie, sin vestigios de arru- gas transversas, con tendencia, por el contrario, 4 formar (13) Escalera.—rEXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI®». 375 pliegues 6 arrugas longitudinales cerca de los himeros; donde la puntuacién es mas basta, con vellosidad fina, larga y di- rigida hacia atras. Patas largas y robustas: tibias anteriores encorvadas hacia afuera, intermedias hacia adentro y con algunas espinas cor- tas y fuertes, posteriores rectas y algo menos espinosas. © Tarsos largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, inter- medios y posteriores de 5. co” Cinco artejos en todos los tarsos; los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.° mas ancho que el fin de la tibia, dos veces tan largo como ancho; el 2.° mas estrecho que el anterior, una mitad mas corto que él y apenas mas largo que ancho; el 3.° mas estrecho que el anterior y ligera- mente mas corto que él, resultando en conjunto el 1.° mas lar- vo que los dos siguientes reunidos, y la pala alargada. Sobre doscientos ejemplares de las Grutas de las Brujas, Ongayo; de las Brujas, Suances; de la Pena, Golbardo; del Castillo, Puente Viesgo; de Orenha, Cobreces; de la provincia de Santander, en Agosto de 1895. B. trianguium Sharp.—Long. 2,7-3,0 mim. DiaGnosts.—Elitros sin estrias transversas; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° mucho mas de dos veces tan largos como anchos, el 8.° tan largo como el 9.° y muy ligeramente mas cor- to que el 7.° y éste tan largo como el 6.°; tarsos anteriores del ~” mas anchos que el fin de la tibia, con su primer artejo mas corto que los dos siguientes reunidos y la pala ancha y fuerte. Cuerpo ovoideo, mucho mas estrechado hacia atras que hacia adelante y bastante convexo, color rojizo. Antenas muy largas, pasando de la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo, pero mas fino que el anterior. 3.°, algo mas corto y fino que el anterior. 4.°, 5.° y 6.° proximamente iguales, un tercio mas largos que el anterior, tan largos proximamente como el 2.°, pero mas finos y apenas engruesados en el apice y muchisimo mas de dos veces tan largios como anchos. 7.°, tan largo como los anteriores, ligera y normalmente en- 76 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (14) gruesado desde la base al apice, donde es bastante mas grueso que ellos. 8.°, muy ligeramente mas corto que el anterior en el ¢’, casi un tercio en la Q: del grueso del 6.°, casi cilindrico y muchisi- mo mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, tan largo como el anterior en el — y algo mas en la Q, muy poco mas corto que el 7.” y aun algo mas engruesado que é]1 desde la base al apice. 10.°, algo mas corto que el anterior y de su misma forma y grosor. 11.°, un tercio mas largo que el anterior y engruesado desde la base hasta sus dos tercios, donde es mas grueso que cual- quiera de los anteriores, después brusca y fuertemente acu- minado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- chura en la base, que es bisinuosa, con los angulos posterio- res agudos, abrazando amplhamente la base de los élitros, ra- pidamente estrechado en curva hacia adelante , finamente punteado y bastante velloso y fuertemente convexo. Elitros mas de dos veces tan largos como anchos, bastante convexos, con su mayor anchura en la base y desde ella estre- chados casi en linea recta hasta su conclusién, donde se re- dondean separadamente, resultando en conjunto sumamente acuminados; sin depresién en la sutura ni estria sutural, re- gular y muy finamente punteados en toda su superficie, sin estrias transversas, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. -atas largas y robustas: tibias anteriores encorvadas hacia afuera, intermedias hacia adentro con espinas numerosas cor- tas y fuertes, posteriores rectas y menos espinosas. 2 Tarsos largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, inter- medios y posteriores de 5. co Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados: el 1.° notablemente mas ancho que el fin de la tibia, tan largo como ancho; el 2.° poco mas estrecho que el anterior, escasamente un tercio mas corto que él, tan largo como ancho; el 3.° bastante mas estrecho que el anterior y mitad mis corto, tan largo como ancho, resultando _ en conjunto el 1.° mas corto que los dos siguientes reunidos y la pala ancha y fuerte. (15) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI®». ST? Sobre cien ejemplares de las Grutas de «Suprevide» (Aban- dames) de Loja (El Mazo) de la provincia de Asturias, en Sep- tiembre de 1894 y Agosto de 1895. Un ejemplar del Sr. Uhagén de la Gruta de la Cabafiuca (Panes) conviene con los ante- riores. B. filicornis Uhag.—Long. 2,5-2,7 mm. Diagnosts.—Elitros sin estrias transversas; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° mucho mas de dos veces tan largos como anchos, el 8.° muy ligeramente mas corto que el 9.° y mas de un tercio mas corto que él 7.° y éste tan largo como el 6.°; tarsos anteriores del ¥ tan anchos como el fin de la tibia, con su primer artejo notablemente mas largo que los dos siguien- tes reunidos y la pala larga y estrecha. Cuerpo en dvalo corto, poco mas estrechado hacia atras que hacia adelante y fuertemente convexo, color rojizo. Antenas muy largas pasando de la mitad del cuerpo y con la maza apenas marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo, pero mas fino que el anterior. 3.°, algo mas corto y fino que el anterior. 4.°,5.° y 6.° proximamente iguales, escasamente un tercio mis largos que el anterior y como é] nada engruesados en el apice; muchisimo mas de dos veces tan largos como anchos. 7.°, tan largo como el anterior, ligera y normalmente en- e@ruesado desde la base al apice, donde es algo mas grueso que él. 8.°, mas de un tercio mas corto que el anterior, del grueso del 6.°, cilindrico y muchisimo mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, muy ligeramente mas largo que el anterior, un tercio mas corto que el 7.° y como él ligeramente engruesado de la base al apice. 10.°, algo mas corto que el anterior y de su misma forma y grosor. 11.°, muy poco mas largo que el anterior, tan largo como el 9.°, engruesado desde la base hasta sus dos tercios, donde es tan grueso como el 10.°, después regularmente acuminado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- 378 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (16) chura en la base que es bisinuosa, con los angulos posteriores agudos abarcando escasamente la base de los élitros, breve- mente estrechado en curva hacia adelante, finamente puntea- do, bastante velloso y regularmente convexo. Elitros apenas dos veces tan largos como anchos y muy con- vexos, con su mayor anchura muy cerca de la base y de aqui regularmente estrechados en curva hasta su terminacién, donde se redondean separadamente, resultando regularmente acuminados, sin depresién en la sutura, pero con estria sutu- ral visible por transparencia, aunque apenas marcada, regu- lar y muy finamente punteados en toda su superficie y sin es- trias transversas, antes bien con tendencia a formar pliegues longitudinales cerca de los primeros, con vellosidad fina, lar- ga y dirigida hacia atras, Patas moderadamente largas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia afuera, intermedias hacia adentro con es- pinas cortas y fuertes, posteriores rectas y menos espinosas. 6 ‘Tarsos largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, inter- medios y posteriores de 5. oS Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados, el 1.° tan ancho como el fin de la tibia, mas largo que ancho y dos veces tan largo como el 2.°; el 2.° mas estrecho que el anterior, casi tan largo como ancho y vez y media tan largo como el 3.”, que es apenas tan largo como ancho y mas estrecho que el anterior, resultando en conjunto el 1.°notablemente mas largo que los dos siguien- tes reunidos y la pala alargada. Sobre cinco ejemplares de la Gruta de Serantes, Santurce; de la provincia de Vizcaya, en Agosto de 1892. Los tipos del Sr. Uhagon convienen con los anteriores. B. Seeboldi Uhag.—Longe. 2,5 mm. DiaGNosis.—Elitros sin estrias transversas; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.°, mucho mas de dos veces tan largos como anchos, el.8.° escasamente un tercio mas corto que el 9.° y el 7.°, y éste tan largo como el 6.°; tarsos anteriores del ( tan anchos como el fin de la tibia, con su primer artejo mas largo que los dos siguientes reunidos y la pala larga y estrecha. Cuerpo en dvalo alargado, algo més estrechado hacia atras que hacia adelante y ligeramente convexo, color rojizo. (7) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCL™». 379 Antenas muy largas pasando de la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo, pero mas fino que el anterior. 3.°, un tercio mas corto y fino que el anterior. 4.°, 5.° y 6.° proximamente iguales, escasamente un tercio mas largos que el anterior y como él apenas engruesados en el Apice; muchisimo mas de dos veces tan largos como anchos. 7.°, tan largo como el anterior, muy ligera y normalmente engruesado desde la base al apice, donde es algo mas grueso que él. 8.°, escasamente un tercio mas corto que el anterior, del grueso del 6.°, cilindrico y mucho mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, escasamente un tercio mas largo que el anterior, tan largo como el 7.° vy como él apenas engruesado desde la base al apice. 10.°, casi un tercio mas corto que el anterior y de su misma forma y grosor. 1].°, apenas mas largo que el anterior y muy ligeramente engruesado desde la base hasta sus tres cuartos, donde es ape- nas mas grueso que él, después redondeado hasta su conclu- sidn en punta roma. Protorax apenas dos veces tan ancho como largo, con su mayor anchura ep la base que es bisinuosa, con los angulos posteriores agudos, abarcando ampliamente la base de los éli- tros, brevemente estrechado en curva hacia adelante, fina- mente punteado, bastante velloso y no muy convexo. Elitros bastante mas de dos veces tan largos como anchos y no muy convexos, con su mayor anchuraen la base 6 muy cerca de ella y desde aqui muy lentamente estrechados en curva continua hasta su terminacion, donde se redondean se- paradamente, resultando regularmente acuminados, sin de- presion en la sutura, pero con estria sutural apenas marcada, regular y muy finamente punteados en toda su superficie y sin estrias transversas, aunque a veces presentan tendencia a ellas cerca de los humeros y en el tercio posterior; con vello- sidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas moderadamente largas v robustas, tibias anteriores en- 3:0 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (18) corvadas hacia afuera, intermedias hacia adentro con espinas cortas y fuertes, posteriores rectas y menos espinosas. © 'Tarsos largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, inter- medios y posteriores de 5. ¢ Cinco artejos en todos los tarsos; los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados, el 1.° tan ancho como el fin de la tibia y dos veces tan largo como el 2.°, mucho mas largo que ancho; el 2.° mas estrecho que el anterior, tan largo como ancho y apenas mas largo que el 3.°, que es algo mis estre- cho, resultando en conjunto el 1.° mas largo que los dos si- guientes reunidos y la pala larga y estrecha. Sobre cinco ejemplares de la Gruta de San Roque, Bilbao, de la provincia de Vizcaya, en Agosto de 1892. Los tipos del Sr. Uhagon de la misma localidad y de las Grutas de Galda- mes convienen con los anteriores. Seccion B. B. flaviobrigensis Uhag.—Long’. 2,0-2,2 mm. DiaGNosis.—Elitros sin estrias transversas; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° nada 6 apenas dos veces tan largos como anchos, el 8.° tan largo como el 9.° y muy poco mas corto que el 7.° y éste tan largo como el 6.°; tarsos anteriores del o7 mas anchos que el fin de la tibia, resultando la pala regularmente alargada, con su primer artejo casi tan largo como los tres si- guientes reunidos. Cuerpo en 6valo corto, notablemente mas estrechado hacia atras que hacia adelante y bastante convexo, color rojizo. Antenas moderadamente largas, pasando apenas de la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: ].°, largo y robusto. 2.°, tan largo, pero algo mas fino que el anterior. 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, proximamente iguales, casi una mitad mas cortos que el anterior y bastante mas finos que él, apenas en- gruesados desde la base al apice y bastante mas de dos veces tan largos como anchos. /.”, tan largo como el anterior, normal y fuertemente en- gruesado desde la base al Apice, donde es bastante mas grueso que él. pwn a. he he a (19) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCLE». 381 8.°, muy poco mas corto que el anterior, apenas engruesado desde la base al apice y apenas mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, tan largo como el anterior, algo mas corto que el 7.° y como él fuertemente engruesado desde la base al apice, ape- nas dos veces tan largo como ancho. 10.°, igeramente mas corto que el anterior y de su misma forma y grosor, vez y media tan largo como ancho. 11.°, mas de vez y media del largo que el anterior, engrue- sado desde la base hasta mas de su mitad, donde es mas grueso que cualquiera de los anteriores, después fuermente acuminado. Protorax dos veces tan ancho como largo, con su mayor anchura en la base que es bisinuosa, con los angulos poste- riores agudos y abarcando la base de los élitros, brevemente estrechado en curva hacia adelante, bastante velloso y regu- larmente convexo. Elitros escasamente dos veces tan largos como anchos, re- wularmente convexos, con su mayor anchura en la base y desde ella brevemente estrechados en curva hasta su conclu- sidn, donde se redondean separadamente, resultando bastante acuminados, sin depresién en la sutura, pero con estria sutural apenas marcada, regular y muy finamente punteados en toda su superficie y sin estrias transversas, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas no muy largas y robustas: tibias anteriores encorva-— das hacia fuera, intermedias hacia adentro y apenas espino- sas, posteriores rectas y aun menos espinosas. 2 Tarsos moderadamente largos, los anteriores de 4 arte- jos sencillos, intermedios y posteriores de 5. o& Cinco artejos en todos los tarsos: los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados, el 1.° algo mas ancho que el fin de la tibia, mas largo que ancho y dos veces tan largo como el 2.°; el 2.° transverso, mas estrecho que el anterior y vez y media tan largo como el 3.°, también transverso y mas estrecho que el anterior, resultando en conjunto el 1.° poco mas corto que los tres siguientes reunidos y la pala alargada. Sobre 50 ejemplares de la Gruta de San Roque, Bilbao; de la provincia de Vizcaya en Agosto de 1893. Los tipos del senor Uhagon de la misma localidad convienen con los anteriores. 382 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (20) B. Sharpi sp. n.—Long. 1,8-2,0 mm. DiaGNosts.—Elitros sin estrias transversas: antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° apenas dos veces tan largoscomo anchos; el 8.° tan largo como el 9.° y un tercio mas corto que el 7.°, y éste no mas largo que el 6.°; tarsos anteriores del (7 mas an- chos que el fin de la tibia, resultando la pala corta y rechon- cha, con su primer artejo notablemente mas corto que los tres siguientes reunidos. Cuerpo en ovalo corto, notablemente mas estrechado hacia atras que hacia adelante y fuertemente convexo, color rojizo. Antenas moderadamente largas, llegando apenas a la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo y algo mas fino que el anterior. 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, prdximamente iguales, una mitad mas cortos que el anterior y mucho mas finos que él, bastante mas de dos veces tan largos como anchos y apenas engruesados de la base al apice. 7.°, tan largo como el anterior y engruesado de la base al dpice, donde es bastante mas grueso que él. 8.°, un tercio mas corto que el anterior, casi cilindrico, pré- ximamente dos veces tan largo como ancho. 9.°, tan largo como el anterior, un tercio mas corto que el 7.°, pero de su mismo grosor y como él engruesado desde la base al Apice, apenas dos veces tan largo como ancho. 10.°, tan largo como el anterior, de su misma forma y aun mas grueso, vez y media tan largo como ancho. 11.°, vez y media del largo que el anterior, engruesado desde la base hasta sus dos tercios, donde es mas grueso que cualquiera de los anteriores, bastante acuminado. Protérax “dos veces tan ancho como largo, con su mayor anchura en la base que es bisinuosa, con los angulos poste- riores agudos, abarcando ampliamente la base de los élitros, brevemente estrechado en curva hacia adelante, bastante ve- lloso y regularmente convexo. Klitros vez y media tan largos como anchos, fuertemente convexos, con su mayor anchura en la base y desde ella rapi- damente estrechados en curva continua hasta su conclusion, donde se redondean separadamente, resultando fuertemente 7”) a (21) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCIE». 383 acuminados; sin depresién en la sutura, pero con estria sutu- ral poco marcada; regular y muy finamente punteados en toda su superficie y sin estrias transversas, aunque en algunos ejemplares se observa tendencia 4 ellas cerca de los htime- ros, con vellosidad fina, no muy larga y dirigida hacia atras. Patas no muy largas y robustas; tibias anteriores encorva- das hacia afuera, intermedias hacia adentro y regularmente espinosas, posteriores casi rectas y menos espinosas. 2 Tarsos moderadamente largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y posteriores de 5. & Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.° mucho mas ancho que el fin de la tibia, apenas mas largo que ancho y vez y media del largo que el 2.°; el 2.° transverso, mucho mas estrecho que el anterior y dos veces del largo que el 3.°, también transverso y mucho mas estrecho que el anterior: resultando en conjunto el 1.° notablemente mas corto que los tres siguientes reunidos y la pala corta y rechoncha. Su tamano, constante y notablemente menor que el de B. cantabrica y la proporcionde los tarsos anteriores en los oo (en B. cantabrica, el 1.° es mas largo que los tres siguientes reunidos y la pala alargada) hacen que a primera vista se di- ferencie de ella, que es la mas préxima; las diferencias con las demas del g@énero aparecen en los cuadros. Sobre 300 ejemplares de las Grutas de las Brujas, Ongayo; de las Brujas, Suances; Sima del Espino, Cudén; de la provin- cia de Santander, en Agosto de 1895. B. cantabrica Uhag.—Lone. 2,2-2,5 mm. DiaGnosis.—Elitros sin estrias transversas:. antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.°, nada 6 apenas dos veces tan largos como anchos; el 8.°, ligeramente mas corto que el 9.°, y casi una mitad mas corto que el 7.°, y éste casi un tercio mas largo que el 6.°; tarsos anteriores del ~ mas anchos que el fin de la tibia, resultando la pala alargada con su primer artejo mas largo que los tres siguientes reunidos. Cuerpo oval, corto, notablemente mas estrechado hacia atras que hacia adelante, y fuertemente convexo, color rojizo. Antenas moderadamente largas, pasando poco de la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. B84 ANALES DE HiSTORIA NATURAL. (22) Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo, pero mas fino que el anterior. 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, proximamente iguales, un tercio mas cortos que el anterior y mucho mas finos que él, mucho mas de dos veces tan largos como anchos y muy ligeramente engruesa- dos de la base al apice. 7.°, Casi un tercio mas largo que el anterior y engruesado (lesde la base al apice, donde es mucho mas grueso que él. &.°, casi una mitad mas corto que el anterior, casi cilindrico y algo mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, ligeramente mas largo que el anterior, un tercio mas corto que el 7.°, y como él muy engruesado desde la base al apice, poco mas de dos veces tan largo como ancho. 10.°, casi un tercio mas corto que el anterior y como él muy engruesado de la base al apice, vez y media tan largo como ancho. 11.°, dos veces tan largo como el anterior, engruesado desde la base hasta sus dos tercios, donde es mas grueso que cual- quiera de los anteriores y apenas acuminado, redondeado en el apice. Protorax dos veces tan ancho como largo, con su mayor anchura en la base, que es bisinuosa, con los angulos poste- riores agudos abarcando ampliamente la base de los élitros, brevemente estrechado en curva hacia delante, bastante vello- so y regularmente convexo. Elitros vez y media tan largos como anchos, fuertemente convexos, con su mayor anchura en la base y desde ella rapi- damente estrechados en curva continua hasta su conclusién, donde se redondean separadamente, resultando fuertemente acuminados, sin depresioén en la sutura pero con estria-sutural poco marcada; regular y muy finamente punteados en toda su superficie y sin estrias transversas, antes bien con tendencia a formar pliegues longitudinales, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas no muy largas y robustas, tibias anteriores encorva- das hacia fuera, intermedias hacia dentro y regularmente espinosas, posteriores rectas y menos espinosas. © Tarsos moderadamente largos, los anteriores de 4 arte- jos sencillos, intermedios y posteriores de 5. _— OL aes! (28) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI®». 385 co” Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los anteriores ensanchados; el 1.° mas ancho que el fin de la tibia, mas largo que ancho y mas de dos veces del largo del 2.°; el 2.° transverso, apenas mas estrecho que el anterior y dos veces del largo del 3.°, que es también transverso y algo mas estre- cho que el anterior, resultando en conjunto el 1.° mas largo que los tres siguientes reunidos y la pala alargada. Sobre 300 ejemplares de las grutas de Achurra y del Calva- vio (Lequeitio), de la provincia de Vizcaya en Agosto de 1892. Los tipos del Sr. Uhagon de las grutas de Galdames convienen con los anteriores como los de la gruta de San Roque (Bilbao). B. vasconica La Brul.—Long. 2,2 mm. DiaGNosis.—LHlitros sin estrias transversas. Antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.°, nada 6 apenas dos veces tan largos como anchos, el 8.° apenas un tercio mas corto que el 7.° y el 9.°, siendo el 7.° tan largo como el 6.° y poco mas de dos veces tan largo como ancho: tarsos anteriores del <7 tan anchos como el fin de la tibia, resultando la pala corta con su primer artejo notablemente mas corto que los dos siguientes reunidos. Cuerpo oval, poco mas estrechado hacia atras que hacia ade- lante y bastante convexo. Antenas moderadamente largas, pasando apenas de la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo pero mas fino que el anterior. 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, proximamente iguales, mas de un tercio mas cortos que el anterior, bastante mas finos que él, ligera- mente engruesados de la base al apice y bastante mas de dos veces tan largos como anchos. 7.°, tan largo como el anterior, normal y fuertemente engrue- sado desde la base al apice donde es bastante mas grueso que él, poco mas de dos veces tan largo como ancho. 8.°, apenas un tercio mas corto que el anterior, casi cilin- drico y muy poco mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, apenas un tercio mas largo que el anterior, tan largo como el 7.° y aun algo mas engruesado que 61 desde la base al apice, dos veces tan largo como ancho. 10.°, ligeramente mas corto que el anterior y como él engrue- ANALES DE HIST, NAT.—XXVIII. 25 386 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (24) sado desde la base al apice, apenas dos veces tan largo como ancho. 11.°, apenas vez y media del largo que el anterior, engrue— sado desde la base hasta sus dos tercios donde es mas grueso. que cualquiera de los anteriores, después regularmente acu-— minado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- chura en la base que es bisinuosa, con los 4ngulos posteriores agudos abarcando la base de los élitros, no muy brevemente- estrechado en curva hacia delante, bastante velloso y regular- mente convexo. Klitros escasamente dos veces tan largos como anchos, regu- larmente convexos, con su mayor anchura en la base y desde ella estrechados en curva no muy brevemente hasta su con- clusion donde se redondean separadamente, resultando poco. acuminados, sin depresién en la sutura pero con estria sutural poco marcada, regular y densamente punteados en toda su superficie y sin estrias transversas, antes bien, con tendencia a formar pliegues longitudinales, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas no muy largas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia fuera, intermedias hacia dentro y apenas espinosas, pos- teriores rectas y alm menos espinosas. 2 ‘Tarsos anteriores de 4artejos sencillos, intermedios y pos--: teriores de 5. o Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.°, tan ancho como el fin de la tibia, tan largo como ancho, apenas vez y media del largo del 2.°; 2.°, transverso, poco mas estrecho que el anterior, vez. y media del largo del 3.°, que es también transverso y poco mas estrecho que el anterior; resultando, en conjunto, el 1.°, mas corto que los dos siguientes reunidos y la pala corta. Sobre 1 ejemplar de la gruta de A/dia (Orduna), de la pro -- vincia de Alava en Agosto de 1892, y 2 ejemplares del senor Uhagon de la misma localidad. B. Cisnerosi. Per. A.—Long. 2,2 mm. DraGNosis.—Hlitros sin estrias transversas. Antenas con los: artejos 8.°, 9.° y 10.°, nada 6 apenas dos veces tan largos como, anchos; el 8.° mitad mas corto que el 7.° y tan largo como el (25) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCLE>. 387 9.°; tarsos anteriores del ~ tan anchos como el fin de la tibia; resultando la pala muy alargada con su primer artejo mas lar- go que los dos siguientes reunidos. Cuerpo en dvalo, bastante mas estrechado hacia atras que hacia delante y bastante convexo. Antenas moderadamente largas, pasando poco de la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: 1.°, largo v robusto. 2.°, tan largo y apenas mas fino que el anterior. 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, préximamente iguales, apenas un tercio mas cortos que el anterior, bastante mas finos que él, ligera- mente engruesados de la base al apice y bastante mas de dos veces tan largos como anchos. 7.°, apenas mas largo que el anterior, normal y muy fuerte- mente engruesado desde la base al apice, donde es bastante mas grueso que el. 8.°, mitad mas corto que el anterior, ligeramente engruesado de la base al apice y apenas mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, apenas mas largo que el anterior, muy fuertemente en- gruesado desde la base al apice, ain mas que el 7.° y dos veces tan largo como ancho. 10.°, ligeramente mas corto que el anterior, de su misma forma y aun mas engruesado que él, vez y media tan largo como ancho. 11.°, mas de vez y media del largo que el anterior, engrue- sado desde la base hasta mas de su mitad, después regular- mente acuminado. Protorax dos veces tan ancho como largo con su mayor anchu- ra en la base que es bisinuosa, con los angulos posteriores agu- dos, abrazando la base de los élitros, brevemente estrechado en curva hacia delante, bastante velloso y regularmente convexo. Elitros dos veces tan largos como anchos, regularmente con- vexos, con su mayor anchura en la base y desde ella estrecha- dos en curva brevemente hasta su conclusién donde se redon- dean separadamente, resultando bastante acuminados, sin de- presion en la sutura, pero con estria sutural apenas marcada, regular y muy finamente punteados en toda su superficie y sin estrias transversas, aunque en algunos ejemplares se nota ten- 388 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (26) dencia 4 ello en la parte media de los élitros, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas no muy largas y robustas, tibias anteriores apenas en- corvadas hacia fuera, intermedias hacia dentro y apenas espi- nosas, posteriores rectas y alin menos espinosas. © Tarsos anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y pos- teriores de 5. co” Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.°, apenas tan ancho como el fin de la tibia, dos veces tan largo como ancho y doble de largo que el 2.°; el 2.° poco mas estrecho que el anterior, tan largo como ancho y vez y media del largo del 3.°, que es poco mas estrecho que el anterior y tan largo como ancho; resul- tando, en conjunto, el 1.° mas largo que los dos siguientes re- unidos y la pala larga y estrecha. Sobre 100 ejemplares de la gruta del Regueril/o (Torrelaguna) de la provincia de Madrid, en Mayo de 1890. B. autumnalis sp. n.—Long. 2,2 mm. DraGNosis.—Elitros sin estrias transversas; antenas con los artejos 8.°,9.° y 10.°, apenas dos veces tan largos como anchos; el 8.° un tercio mas corto que el 9.° y una mitad mas corto que el 7.°, y éste un tercio mas largo que el 6.°; el 10.°, un tercio mas corto que el 9.°, y el 11.° doble de largo que el 10.°; tarsos anteriores del o mas estrechos que el fin de la tibia, resultan- do la pala estrecha y alargada con su primer artejo mas corto que los dos siguientes reunidos y todos muy apretados. Cuerpo en dvalo alargado, muy notablemente mas estre- chado hacia atras que hacia adelante y bastante convexo. Antenas moderadamente largas, pasando apenas de la mitad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, ligeramente mas largo y mas fino que el anterior. 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, préximamente iguales, mas de un tercio mis cortos que el anterior y mucho mas finos que él, casi ci- lindricos y bastante mas de dos veces tan largos como anchos. 7.°, un tercio mas largo que el anterior, normal y fuerte- mente engruesado de la base al Apice, donde es bastante mas grueso que él. (27) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI®». B89. 8.°, una mitad mas corto qne el anterior, apenas engruesado de la base al Apice, apenas dos veces tan largo como ancho. 9.°, un tercio mas largo que el anterior, un tercio mas corto que el 7.° y aun mas fuertemente engruesado que el de la base al apice, dos veces tan largo como ancho. 10.°, un tercio mas corto que el anterior y como é! fuerte- mente engruesado de la base al apice, vez y media tan largo como ancho. 11.°, doble de largo que el anterior, muy fuertemente en- e@ruesado desde la base hasta mas de sus dos tercios, donde es mas grueso que cualquiera de los anteriores, bruscamente acuminado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- chura en la base que es bisinuosa, con los angulos posterio- res agudos abarcando la base de los élitros, brevemente estre- chado en curva hacia adelante, bastante velloso y regular- mente Convexo. Elitros dos veces tan largos como anchos, regularmente convexos, con su mayor anchura en la base, y desde ella es- trechados lenta y continuamente en linea casi recta hasta su conclusién, donde se redondean separadamente, resultando muy acuminados; sin depresién en la sutura, pero con estria sutural fuertemente marcada en toda su longitud, borrada solo en la base; regular y muy finamente punteados en toda su superficie y sin estrias transversas ni aun vestigios de ellas; con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas no muy largas y robustas, tibias anteriores encorva~ das hacia afuera, intermedias apenas hacia adentro y regular- mente espinosas, posteriores rectas y menos espinosas. Q Tarsos moderadamente largos, los anteriores de 4 ar- tejos sencillos, intermedios y posteriores de 5. co Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.° mas estrecho que el fin de la tibia, mas largo que ancho y vez y media del largo que el 2.°; el 2.° tan largo como ancho, tan ancho como el anterior y apenas mas largo que el 3.°; el 3.° tan largo como ancho y ligeramente mas estrecho que el anterior, resultando en con- junto el 1.° mas corto que los dos siguientes reunidos y la pala larga y estrecha, con los artejos apretados. Su tamafo constante y notablemente mayor que el de 3% ANALES DE HISTORIA NATURAL. (28) B. Perexi y la proporcion de sus artejos antenales, muy diferen- tes, hace que 4 primera vista se diferencie de ella, que es la mas proxima; las diferencias con las demas del género apare- cen en los cuadros. Sobre 34 ejemplares de las Grutas de Penas Negras, Puente de Arce; del Castillo, Puente Viesgo, en la provincia de San- tander, en Septiembre de 1894 y Agosto de 1895. B. Perezi Sharp.—Long. 1,8-2,0 mm. DraGnosis.—Elitros sin estrias transversas; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.°, poco mas largos que anchos; el 8.° ape- nas un tercio mas corto que el 9.° y una mitad mas corto que el 7.°, y éste apenas un tercio mas largo que el 6.°; el 10.° tan largo como el 9.°, y el 11.° bastante mas del doble de largo que el 10.°; tarsos anteriores del po’ mas estrechos que el fin de la tibia, resultando la pala muy alargada con su primer artejo, tan largo como los dos siguientes reunidos y todos nada apre- tados. Cuerpo en évalo alargado, poco mas estrechado hacia atras que hacia adelante y bastante convexo. Antenas moderadamente largas, pasando apenas de la mi- tad del cuerpo y con la maza bien marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, igeramente mas largo y mas fino que el anterior. 3.°, 4.% 5.° y 6.°, préximamente iguales, una mitad mas cortos que el anterior y mucho mas finos que él, algo mas de dos veces tan largos como anchos. 7.°, apenas un tercio mas largo que el anterior y no muy fuertemente engruesado desde la base al apice, pero mucho mas grueso que él desde la base. 8.°, mitad mas corto que el anterior, engruesado en su parte media y poco mas largo que ancho. 9.°, apenas un tercio mas largo que el anterior, mas de un tercio mas corto que el 7.°, y como él no muy engruesado desde la base al Apice, aunque muy grueso y apenas vez y me- dia tan largo como ancho. 10.°, tan largo como el anterior y de su misma forma y orosor. 11.°, bastante mas del doble de largo que el anterior, muy ——— (29) Escalera.—uxAMEN DEL GRUPO «“BATHYSCI&». 391 fuertemente engruesado desde la base hasta mas de sus dos tercios, donde es mas grueso que cualquiera de los anteriores, después fuertemente acuminado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- -chura en la base que es bisinuosa, con los angulos posteriores agudos abarcando la parte de los élitros, brevemente estre- ¢chado en curva hacia adelante, bastante velloso y regular- mente convexo. Elitros dos veces tan largos como anchos, regularmente convexos, con su mayor anchura en la base y desde ella estre- chados lentos y continuamente en curva hasta su conclusién, donde se redondean separadamente, resultando regularmente acuminados, sin depresién en la sutura ni estria sutural, a lo sumo vestigios de ella visible solo por transparencia en algun ejemplar, regular y muy finamente punteados en toda su su- perficie y sin estrias transversales, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas no muy largas y robustas, tibias anteriores encorva- das hacia afuera, intermedia hacia adentro y apenas espino- ‘Sas, posteriores rectas y aun menos espinosas. © Tarsos anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y ‘posteriores de 5. co Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.° mas estrecho que el fin de la tibia, mas largo que ancho y doble de largo que el 2.°; el 2.° mas estrecho que el anterior, mas largo que ancho y algo mas largo que el 3.°, que es también mas estrecho que el anterior y tan largo como ancho, resultando en conjunto el 1.” tan largo como los dos siguientes reunidos y la pala muy alar- gada con sus artejos nada apretados. Sobre 6 ejemplares de las Grutas de la Cabanuca, Panes; de Loja, El Mazo; de la provincia de Asturias, en Septiembre de 1894 y Agosto de 1895. Seccion C. B. tropica Ab.—Long. 1,5-2,0 mm. DiaGNosis.—Elitros sin estrias transversas; antenas con el artejo 8.°, apenas tan largo como ancho, globular y los 9.° y 1.° muy poco mas largos que anchos; el 7.° doble de largo que 392 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (80). el 6.°, y el 8.° una mitad mas corto que el 7.° y un tercio mas corto que el 9.°; tarsos anteriores del o mas estrechos que el fin de la tibia y con el primer artejo de 1os mismos mucho mas corto que los dos siguientes reunidos. . Cuerpo en dvalo muy ancho, bastante estrechado posterior- mente y muy fuertemente convexo. Antenas cortas, pasando poco del borde posterior del cose- lete y con la maza bien marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo y bastante mas fino que el anterior. 3.°, 4.° y 5.°, una mitad mas cortos que el anterior y bas— tante mas finos que él, dos veces tan largos como anchos. 6.°, un tercio mas corto que los anteriores, vez y media tan largo como ancho. 7.°, doble de largo que el anterior y mucho mas grueso que él, engruesado de la base al apice, dos veces tan largo como ancho. 8.°, globular, mitad mas corto que el anterior y mas fino que él, tan largo como el 6.°, pero mas grueso, resultando, por tanto, tan ancho como largo. 9.°, y 10.°, iguales, un tercio mas largos que el anterior y mas gruesos que él, engruesado de la base al apice y apenas mas largos que anchos. 11.°, vez y media tan largo como el anterior y poco acumi- nado. Protoérax dos veces tan ancho como largo con su mayor an- chura 4 un cuarto de la base y desde ahi rapidamente estre- chado en curva hacia adelante; con los angulos posteriores agudos abarcando ampliamente la base de los élitros, bastante velloso y fuertemente convexo. Hlitros vez y media tan largo como ancho con su mayor an- chura en la base y desde ella rapidamente estrechados en curva hasta su conclusién, donde se redondean separadamen- te (con la particularidad de que en algunos ejemplares en vez de redondearse terminan en punta ligeramente dehiscente, sin que los tales individuos presenten cambio alguno en sus demas caracteres); ligeramente deprimidos 4 lo largo de la sutura, pero sin estria sutural; muy regular y fuertemente punteados en toda su superficie y sin arrugas transver— (31) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCLE>». 393 sas, con vellosidad fina no muy larga y dirigida hacia atras. Patas cortas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia afuera, intermedias hacia adentro y ligeramente espinosas, posteriores rectas y menos espinosas aun. Q Tarsos anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y posteriores de 5. o& Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.° mas estrecho que el fin de la tibia, mas largo que ancho y apenas mas largo que el 2.°; el 2.° tan largo como ancho, muy poco mas estrecho que el anterior y poco mas largo que el 3.°; el 3.° tan ancho como largo y algo mas estrecho que el anterior, resultando en con- junto el 1.° mucho mas corto que los dos siguientes rennidos, Sobre 200 ejemplares de la Gruta de las Maravillas, Carca- gente; Simat del Aigua, Carcagente; de la provincia de Va- lencia, en Noviembre de 1892 y Mayo de 1891. Seccion D. B. Crotchi Sharp.— Long. 2,4 mm. DraGnosis.—Elitros estriados transversalmente; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.°, apenas dos veces tan largos como an- chos, el 7.° casi un tercio mas largo que el 6.°, y el 8.° una mitad mas corto que el 7.° y casi tan largo como el 9.°; tarsos anteriores del co” notablemente mas anchos que el fin de la tibia y con el primer artejo de los mismos mas largo que los dos siguientes reunidos. Cuerpo en 6valo alargado y poco estrechado posteriormente y regularmente convexo. Antenas moderadamente largas, pasando poco de la mitad del cuerpo y con la maza bien marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo como el anterior, apenas mas fino que él y ligeramente engruesado de la base al apice. 3.°, 4.° y 5.°, proximamente iguales, mas de un tercio mas cortos que el anterior y mucho mas finos que él, apenas en- gruesados de la base al apice y mucho mas de dos veces tan largos como anchos. 94 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (32) 6.°, ligeramente mas corto que los anteriores y de su misma forma y grosor. 7.°, casi un tercio mas corto que el anterior, muy fuerte- mente engruesado de la base al apice y bastante mas grueso que él. &.°, una mitad mas corto que el ane ovalar, vez y shiediee tan largo como ancho. 9.°, poco mas largo que el anterior, casi un tercio mas corté que al 7.°y como él fuertemente engruesado de la base al apice, apenas dos veces tan largo como ancho. 10.°, muy poco mas corto que el anterior y de su misma for- ma y atin mas engruesado que él, vez y media tan largo como ancho. . 11.°, mas de vez y media del largo que el anterior, engrue- sado desde la base hasta mas de su mitad, después fuerte- mente acuminado. Protérax dos veces tan ancho como largo, cou su mayor an- chura en la base que es bisinuosa, estrechado no muy breve- mente hacia adelante y con los angulos posteriores poco agu- dos y abarcando apenas la base de los élitros, bastante velloso vy regularmente convexo. . Hlitros dos veces tan largos como anchos, con su mayor an- chura en la base, paralelos hasta un cuarto de ella, después lentamente estrechados hasta su conclusidn en curva continua y redondeados separadamente, resultando poco acuminados; sin depresién en la sutura ni estria sutural; regular y muy finamente punteados en toda su superficie, formando arrugas transversas muy poco marcadas, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. -atas moderadamente largas y robystas, tibias anteriores encorvadas hacia afuera, intermedias hacia adentro y regu- larmente espinosas, posteriores rectas y menos espinosas. 2 ‘Tarsos moderadamente largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y posteriores de 5. © Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.° bastante mas ancho que el fin de la ae mas largo que ancho y casi doble de largo que el 2.°; el 2.° tan ancho como el-anterior, tan largo como ancho y pétabYomenis mas largo que el 3.°; el 3.° apenas tan largo como ancho y mas estrecho que el anterior, resultando. (33) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCL®». 395 en conjunto el 1.° mas largo que los dos siguientes reunidos y la pala alargada. Sobre el ejemplar o” que sirvié 4 Uhagén para completar la descripcion de Shap. y recogido por los Sres. Crotch y Uhagoén en la Gruta de Orobe, Alsasua, de la provincia de Alava. B. Mazarredoi Uhag.—Long. 2,5 mm. DiaGnosis.—Elitros estriados transversalmente; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.°, apenas dos veces tan largos como an- chos; el 7.° apenas mas largo que el 6.°, y el 8.° mas de una mitad del largo que el 7.° y casi una mitad del largo que el 9.°; tarsos anteriores del y tan anchos como el fin de la tibia y con el primer artejo de los mismos notablemente mas corto que los dos siguientes reunidos. Cuerpo en évalo alargado, bastante estrechado posterior- mente y regularmente convexo. Antenas moderadamente largas, pasando apenas de la mitad del cuerpo y con la maza bien marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo como el anterior y apenas mas fino que él y ligeramente engruesado de la base al apice. 3.°, 4.° y 5.°, proximamente iguales, apenas un tercio mas cortos que el anterior y bastante mas finos que él, apenas en- eruesados de la base al A4pice y mucho mas de dos veces tan largos como anchos. 6.°, ligeramente mas corto que los anteriores y de su misma forma y grosor. 7.°, apenas mas largo que el anterior, muy fuertemente en- gruesado de la base al 4pice y mucho mas grueso que él. &.°, mas de una mitad mas corto que el anterior, ovalar, vez y media tan largo como ancho. 9.°, casi una mitad mas largo que el anterior y muy poco mas corto que el 7.° y como él fuertemente engruesado de la “base al apice; apenas dos veces mas largo que ancho. 10.°, casi un tercio mas corto que el anterior y de su misma forma y grosor, apenas vez y media mas largo que ancho. 11.°, mas de vez y media del largo que el anterior, ovalar y poco acuminado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- 396 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (34) chura en la base que es bisinuosa, brevemente estrechado en curva hacia adelante y con los angulos posteriores agudos abarcando ampliamente la base de los élitros, bastante velloso y regularmente convexo. Klitros apenas dos veces tan largos como anchos, con su mayor anchura en la base y desde ella lentamente estrecha- dos en curva hasta su conclusién, donde se redondean separa- damente, resultando bastante acuminados; sin depresién en la sutura ni estria sutural; regular y muy finamente puntea- dos en toda su superficie, formando arrugas transversas muy poco marcadas, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas moderadamente largas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia afuera, intermedias hacia adentro y ligera- mente espinosas, posteriores rectas y aln mas espinosas. 2 ‘Tarsos moderadamente largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y posteriores de 5. < Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.° tan ancho como el fin de la tibia, tan largo como ancho y nada 6 apenas mas largo que el 2.°; el 2.° apenas tan ancho como el anterior, casi transver- so y no mas largo que el 3.°; el 3.° ligeramente mas estrecho que el anterior y ligeramente mas largo que ancho, resultan- do en conjunto el 1.° notablemente mas corto que los dos si- guientes reunidos y la pala corta. Sobre un ejemplar ,. 397 Antenas muy largas, pasando bastante de la mitad del cuerpo y con la maza bien marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, del mismo largo y grueso que el anterior. 3.° y 4.°, iguales, tan largos pero mas finos que el anterior y engruesados ligeramente de la base al apice. 5.°, el mayor de todos, mas grueso y largo que aquellos entre quienes esta y mas grueso en su parte media que en la base y en el apice. 6.°, un tercio mas corto que el anterior y de su misma forma aunque algo mas fino que él. 7.°, tan largo como aquellos entre quienes esta pero mucho mas grueso que ellos, como dos veces tan largo como ancho y normalmente engruesado de la base al apice. 8.°, tan largo como el anterior, mas cilindrico y bastante mas fino que él, resultando, por ello, bastante mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, tan largo como el anterior, tan grueso como el 7.° y de su misma forma. 10.°, igeramente mas corto que el anterior y de su misma forma y grosor. 11.°, igeramente mas largo que el anterior y poco acumi- nado. Protorax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- chura a mas de un tercio de la base que es bisinuosa y con los dngulos posteriores agudos abarcando la base de los élitros, y muy brevemente estrechado después en curva hacia adelante, bastante velloso y regularmente convexo. Elitros mas de dos veces tan largos como anchos, con su mayor anchura en la base y estrechados lentamente en cur- va continua hasta su conclusién, donde se redondean sepa- radamente no resultando muy acuminados; sin depresién en 5 la sutura ni estria sutural; regular y muy finamente puntea- dos en toda su superficie formando arrugas transversas bieu marcadas: con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas largas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia fuera, intermedias hacia dentro y apenas espinosas, posterio-— res rectas y sin mas espinas que las terminales. o” Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los 398 ANALES DE HISTORIA NATURAL. * -- = (36) tarsos anteriores ensanchados: el 1.°, tan ancho como el fin de la tibia y notablemente mas corto que los tres siguientes re- unidos. Diferénciase de 2. A deillei, a la cual dice Reitter que se pa- rece, en que ésta tiene el artejo 5.° proximamente de la misma longitud que aquellos entre quienes esta y de su misma forma, siendo el 8.° mas de un tercio mas corto qne los 7.° y 9.°, y te- niendo el protorax su mayor anchura en la base; mientras que en B. fugitiva el artejo 5.° es un tercio mas largo que aquellos entre quienes esta, siendo el 8.° tan largo como los 7.° y 9.° y teniendo el protorax su mayor anchura a mas de un tercio de la base: de las espanolas distinguese 4 primera vista y sus diferencias estan notadas en los cuadros que acompanan. Sobre el ejemplar o comunicado por el Dr. Heyden, y que sirvid & Reitter para describir, aunque incompletamente, la especie, lleva en la etiqueta la indicacién de Gruta de Montse- vrat, pero yo no pude hallarla cuando hice el viaje expresa- mente para buscarla. B. Bolivari sp. n.—Long. 3,4 mm. DraGNosis.—Elitros estriados transversalmente: antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° mucho mas de dos veces tan largos como anchos; el 8.° tan largo como el 9.° y un tercio mas corto que el 7.°; el 5.°, de la misma forma, grosor y longitud que aquellos entre quienes esta: tarsos anteriores del co” tan anchos como el fin de la tibia. Cuerpo en 6valo alargado y muy notablemente mas estre- chado hacia atras que hacia adelante y bastante convexo. Antenas muy largas y finas, bastante mas largas que la mi- tad del cuerpo y con la maza poco marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo pero mas fino que el anterior. 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, proximamente iguales, tan largos como el anterior y mucho mas finos que él, casi cilindricos, apenas engruesados en el apice y muchisimo mas de dos veces tan largos como anchos. 7.°, tan largo como los anteriores, mas grueso que ellos y mas engruesado en su terminacidn, abultado solamente desde su mitad al apice. (37) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO’ «“BATHYSCLE>. 399 8.°, un tercio mas corto que el anterior, cilindrico y mucho mas de dos veces tan largo como ancho. 9.°, tan largo como el anterior, un tercio mas corto que el 7.° y tan grueso como él, pero engruesado normalmente de la base al apice. 10.°, algo mas corto que el anterior, y de su misma forma y g@rosor y aunque el menor de todos, mas de dos veces tan largo como ancho. 11.°, algo mas largo que el anterior, de la longitud del 9.° y no mas grueso que él, fuertemente acuminado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- chura muy cerca de la base, que es. bisinuosa, y con los angu- los posteriores agudos abarcando la base de los élitros, muy brevemente estrechado en curva hacia adelante desde muy cerca de la base, bastante velloso y regularmente convexo. Elitros aleo mas de dos veces tan largos como anchos, con su mayor anchura a un cuarto de la base y estrechados luego lenta pero fuertemente en linea casi recta hasta su conclusién donde se redondean separadamente, resultando muy acumi- nados: con la sutura ligeramente hundida y con estria sutural apenas marcada hasta la mitad de los élitros; regular y muy finamente punteados en toda su superficie, formando arrugas transversas muy marcadas; con vellosidad fina, larga y diri- gida hacia atras. Patas largas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia fuera, intermedias hacia dentro y bastante espinosas, poste- riores rectas y menos espinosas. © tarsos bastante largos, los anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y posteriores de.5. oO cinco artejos en todos los tarsos; los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados: el 1.°, tan ancho como el fin de la tibia, mucho mas largo que ancho y mas del doble de largo que el 2.°; éste apenas mas largo que ancho, mas estrecho que el anterior y no mas largo que el 3.°, el que 4 su vez es tan largo como ancho y bastante mas estrecho que el anterior; resultando, en conjunto, el 1.° mas largo que los dos siguien- tes reunidos y la pala alargada. Se distingue 4 primera vista de todas las espanolas y recuer- da 4 las especies francesas B. Bonvouloiri y B. Piochardi por pasar sus antenas de la mitad del cuerpo y como ellas con 400 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (38) arrugas transversas; estria sutural borrada al fin de los élitros; cuerpo sensiblemente mas estrechado hacia atras que hacia adelante y con las tibias posteriores rectas en los dos sexos; pero B. Bonvouloivi tiene el artejo 7.° engruesado normalmente desde la base, los 5.° y 6.° cilindricos y el 8.° poco mas de dos veces mas largo que ancho; y B. Piochardi tiene el artejo 7.° también engruesado normalmente desde la base, los 2.°, 3.° y 4.°, iguales, notablemente mas finos y cortos que los 1.° y 5.°, y los 5.° y 6.°, de otra forma, engruesados en su parte media. Sobre 7 ejemplares de la gruta de la Pea (Jaulo), de la pro- vincia de Huesca en Julio de 1893. Seccion F. B. adnexa. Schauff.—Long. 1,6 mm. DiaGNosis.—Elitros apenas estriados transversalmente; ante- nas con los artejos 8.°, 9.° y 10.° tan largos como anchos, el 7.° dos veces tan largo como ancho; los 9.° y 10.° mas cortos que el 7.° y notablemente mas anchos que 61; el 11.° casi dos veces tan largo como el 10.°; tarsos anteriores del (7 mas estrechos que el fin de la tibia con su primer artejo notablemente mas corto que los dos siguientes reunidos. Cuerpo en 6valo no muy corto, poco mas estrechado hacia atras que hacia adelante y poco convexo. Antenas cortas pasando apenas del borde posterior del pro- torax y con la maza bien manifiesta. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, algo mas largo que el anterior y tan grueso como él. 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, proximamente iguales, mucho mas de una mitad mas cortos que el anterior y muchisimo mas finos que él; algo mas largos que anchos. 7.°, doble de largo que el anterior, fuertemente engruesado desde la base al Apice, escasamente dos veces tan largo como ancho. 8.°, mas de una mitad mas corto que el anterior y apenas mas fino que él, globular y tan ancho como largo. 9.° y 10.°, proximamente iguales, algo mas largos que el an- (39) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI®». 401 terior; un tercio mas cortos que el 7.° y bastante mas gruesos que él, tan largos como anchos. 11.°, casi dos veces tan largo como el 10.°, engruesado desde la base hasta su mitad, donde es mas grueso que los anterio- res, después muy acuminado. Protorax dos veces tan ancho como largo, con su mayor anchura en la base, que es bisinuosa, con los angulos poste- riores agudos abarcando la base de los élitros, brevemente estrechado en curva hacia adelante; bastante velloso y modera- damente convexo. Elitros dos veces tan largos como anchos, con su mayor an- chura en la base y desde ella muy lentamente estrechados en curva hasta su conclusion, donde se redondean separadamente, resultando subtruncados; sin depresién en la sutura pero con estria sutural bien marcada, regular y finamente punteados en toda su superficie, con ligeras estrias’ transversas ape- nas marcadas y con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. Patas cortas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia fuera, intermedias hacia dentro, y regularmente espinosas, posteriores rectas y menos espinosas. Q Tarsos anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y posteriores de 5. co Cinco artejos en todos los tarsos; los tres primeros de los tarsos anteriores apenas ensanchados; el 1.°, apenas mas lar- go que ancho, mucho mas estrecho que el fin de la tibia, y no mas largo que el 2.°; éste tan ancho como el anterior, tan largo como ancho y apenas mas largo que el 3.°, es muy poco mas estrecho que el anterior; resultando, en conjunto, el 1.° muchisimo mas corto que los dos siguientes reunidos y la pala paralela y alargada. Sobre 2 ejemplares de la gruta de Juan Bueno (Viernoles), y entre las hojas cerca de Cobreces, de la provincia de Santan- der, en Agosto de 1895; los ejemplares del Sr. Uhagoén de esta ultima localidad convienen con los anteriores. B. rugosa. Sharp.—Lone. 2,0 mm. DIAGNOSIS. Klitrcs estriados transversalmente; antenas con los artejos:8.°, 9.° y 10.°, tan largos como anchos; el 7.°, vez y media tan largo como ancho; los 9.° y 10.°, mas cortos que el ANALES DE HIST. NAT.—XXVHI. 26 402 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (40) 7.° y apenas mas gruesos que él; el 11.° vez y media tan largo como el 10.°; tarsos anteriores del ¢ poco mas estrechos que el fin de la tibia, con su primer artejo tan largo como los dos siguientes reunidos. Cuerpo en évalo no muy corto, poco mas estrechado hacia atras que hacia adelante y poco convexo. Antenas cortas, pasando poco del borde posterior del proté- rax y con la maza bien marcada. Artejos: 1.°, largo y robusto. 2.°, tan largo y del grueso que el anterior. 3.°, 4.°,5.° y6.°, proximamente iguales, mitad mas cortos que el anterior, apenas dos veces tan largos como anchos y ape- nas engruesados en el apice. 7.°, doble de largo que el anterior, mucho mas grueso que él y engruesado desde la base al apice, casi dos veces tan largo como ancho. 8.°, mitad mas corto que el anterior, tan largo como ancho y engruesado en su parte media. 9.°, un tercio mas largo que el anterior, mas de un tercio mas corto que el 7.° y apenas mas grueso que él y tan largo como ancho. 10.°, del largo y grueso que el anterior. 11.°, vez y media tan largo como el 10.°, apenas mas grueso y no muy acuminado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor an- chura en la base, que es bisinuosa, y con los angulos posterio- res awudos, abarcando ampliamente la base de los élitros, no muy brevemente estrechado en curva hacia delante, bastante velloso y regularmente convexo. Elitros dos veces tan largos como anchos, con su mayor an- chura en la base y poco estrechados, en curva; hasta su con- clusién, donde se redondean separadamente, resultando sub- truncados; sin depresiOn en la sutura ni estria sutural; regular y muy finamente punteados en toda su superficie formando arrugas transversas bien marcadas, con vellosidad fina, larga y drigida hacia atras. Patas cortas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia fuera, intermedias hacia dentro y con espinas cortas y nume- 1osas, posteriores rectas y menos espinosas. (41) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCLE». 403 © Tarsos anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y posteriores de 5. o Cinco artejos en todos los tarsos; los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.°, mas estrecho que el fin de la tibia, mucho mas largo que ancho y doble de largo que el 2.°; éste apenas mas largo que ancho, ligeramente mas estrecho que el anterior y no mas largo que el 3.°, que es tan largo como ancho y bastante mas estrecho que el anterior; resultando, en conjunto, el 1.” tan largo como los dos siguien- tes reunidos y la pala larga y estrecha. Sobre 6 ejemplares de Alsasua (Alava) y Zumaya (Guiptz- coa), entre las hojas. Uno de los ejemplares o7 de Alsasua tiene el artejo 8.° vez y media tan largo como ancho y los demas artejos también mas largos proporcionalmente; pero la disposicién de los tar- sos anteriores es la misma en los otros ejemplares oo de di- cha localidad; por el contrario, en 4 ejemplares 9 de Zuazo (Alava), los artejos antenales son mas cortos proporcional- mente, pero guardan también la misma proporcién que en los ejemplares 92 de Alsasua y Zumaya; en los ejemplares de Zuazo el cuerpo es también mas ovalado y no tan deprimido; desgraciadamente, faltando o¢ de dicha localidad, no es posi- ble incorporarlos, sin que quede alguna duda, a la especie de que tratamos. Lo que si es incontrovertible, es que B. rugosa Sharp. es muy variable. B. Uhagoni Sharp.—Long. 1,0-1,2 mm. DiaGnosis.—Hlitros estriados transversalmente; antenas con los artejos 8.°, 9.° y 10.°, tan largos como anchos; el 7.° apenas vez y media tan largo como ancho: los 9.° y 10.° tan largos como el 7.° y mucho mas gruesos que él; el 11.° poco mas largo que el 10.°; tarsos anteriores del mas estrechos que el fin de la tibia con su primer artejo. Cuerpo en 6valo alargado, notablemente mas estrechado hacia atras que hacia adelante y regularmento convexo. Antenas cortas, pasando poco del borde posterior del protd- rax y con la maza bien marcada. Artejos: 1.9, largo y robusto. 2.°, tan largo y del grueso que el anterior. 404 ANALES DE HiSTORIA NATURAL. (42) 3.°, 4.°, 5.° y 6.°, proximamente iguales, mucho mas de una tmitad mas cortos que el anterior y mucho mas finos que él, escasamente dos veces tan largos como anchos y apenas en— gruesados en el apice. 7.°, poco mas largo que el anterior, bastante mas grueso que él y no muy engruesado desde la base al apice, poco mas largo que ancho. 8.°, mitad mas corto que el anterior, mas fino que él, tan largo como ancho, globular. 9.° y 10.°, proximamente iguales, algo mas largos que el an- terior, pero mucho mas gruesos que él, no muy engruesados desde la base al apice, apenas tan largos como anchos, proxi- mamente tan largos como el 7.°, pero mucho mas gruesos. 11.°, poco mas largo que el anterior y bastante mas grueso que él, casi globular y apenas acuminado. Protérax dos veces tan ancho como largo, con su mayor anchura muy cerca de la base que es bisinuosa y con los an- gulos posteriores agudos, abrazando ampliamente la base de los élitros, brevemente estrechado en curva hacia adelante y bastante convexo. Klitros dos veces tan largos como anchos, con su mayor an- chura en la base y brevemente estrechados en curva hasta su conclusién, donde se redondean separadamente, resultando bastante acuminados; sin depresién en la sutura ni estria su- tural, regular y muy finamente punteados en toda su superfi- cie, formando finas arrugas transversas bien marcadas, con vellosidad fina, larga y dirigida hacia atras. -atas cortas y robustas, tibias anteriores encorvadas hacia afuera, intermedias apenas hacia adentro y con algunas espi- nas cortas; las posteriores rectas y menos espinosas. 2 Tarsos anteriores de 4 artejos sencillos, intermedios y posteriores de 5. ~ Cinco artejos en todos los tarsos, los tres primeros de los tarsos anteriores ensanchados; el 1.° mas estrecho que el fin de la tibia, poco mas largo que ancho y apenas mas largo que el 2.°; éste tan largo como ancho, apenas mas estrecho que el anterior y apenas mas largo que el 3.°, que es también algo mas estrecho que el anterior y tan largo como ancho, resul— tando, en conjunto, el 1.° mas corto que los dos siguientes re- unidos y la pala corta. (43) Escalera.—EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI®». 405 Sobre 40 ejemplares de Suances, Santander; entre las hojas en Agosto de 1895; los ejemplares de Reinosa del Sr. Uhagon convienen en un todo con los anteriores. Observaciones sobre el medio en que viven y modos de vida de las especies del género «Bathyscia». 1.2. Dentro de las grutas, generalmente, la temperatura lo mismo que el grado de humedad, son mas constantes que en el exterior; pero lejos de seriguales, las grutas 6 cavernas son absolutamente distintas unas de otras en cuanto 4 las condi- ciones de vida que pueden ofrecer a las especies que susten— tan; a tal punto, que ciertamente no habra dos idénticas res— pecto a temperatura, grado de humedad y condicion del suelo; es mas, en la misma gruta hay parajes totalmente diferentes bajo estos respectos; y en cuanto 4 la igualdad del lugar en el tiempo, creo poder afirmar que en esas cavidades los trastor- nos ocurren en términos comparables a los mayores que pue- den alterar la superficie terrestre. Asi, por ejemplo, arrastre por las aguas de sedimentos anti- guos y lavado consiguiente de la capa caliza; sustitucion luego por otros de diferentes clases y espesor, invasién por las aguas de partes secas de la gruta y desecacién de otras por nueva entrada 6 salida de las aguas: hundimientos parciales que abren 6 cierran paso 4 corrientes de aire, etc., son acci- dentes que cambian totalmente las condiciones de las grutas, aqui donde las filtraciones son tan grandes, cuando en hoyas 6 cuencas, por la gran cogida de aguas del exterior, verdade- ros torrentes se precipitan en ellas trastornandolo todo; algu- nas grutas, las menos, con fuertes corrientes atmosféricas y con un ambiente mas seco por consiguiente; unas infectadas por los gases de espesa capa de murcielaguina; otras lavadas y lustrosas, sin que el menor residuo de arenas 6 de arcillas recubra la capa caliza. Respondiendo 4 estas condiciones de vida, la fauna caverni- cola, dentro de la uniformidad de tipo en el grupo Bathyscie, presenta gran numero de especificaciones acomodadas a ha- bitat diferente, y en grado tan variado que cada gruta 6 nt- cleo de ellas tiene una 6 varias formas exclusivamente suyas: fendmeno en un todo semejante al que presentan las faunas insulares y alpinas y tan facilmente explicable. 406 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (44): 2.° Las especies acomodadas 4 un género de vida mas ac- cidentado deben sufrir menos, si el medio varia, que aquellas otras que viven en un medio mas uniforme, cuando por una causa cualquiera este medio cambia; en tal caso, no pudiendo acomodarse a él, las especies son sustituidas por nuevas for- mas 6 desaparecen; explicase asi el gran nimero de grutas deshabitadas y el que en un nucleo de cuevas pobladas haya alguna sin habitantes, por emigracidn muy dificil, 6 por ex- tincidn mas frecuentemente; por la misma ley las especies frondicolas del género Bathyscia, viviendo un medio menos uniforme y no tan restringido, estan en corta minoria y ocu- pando extensas areas. 3.°. En las especies del género Bathyscia no hay variedades por sus condiciones especialisimas de vida; encerradas en una eruta 6 grupo de ellas, imposibilitadas de dispersidn geogra- fica actual, sometidos 4 medios uniformes y constantes sus in- dividuos, privados de cruzamientos por la imposibilidad de nacimiento de razas (pues una especie determinada no puede en igualdad de condiciones variar de modos diferentes, sino uniforme y conjuntamente en generaciones sucesivas), las es- pecies del genero Bathyscia no tienen a su lado variedades actuales. Dentro de las especies varian enormemente sus individuos en tamano y puntuacion, pero conservando sus caracteres per- fectamente fijos. Hay en el género notable paralelismo entre sus especies, repitiéndose los caracteres en los diferentes grupos de un modo uniforme; pero si, por ejemplo, en una especie la propor- cién de unos artejos antenales con otros es la misma que la que presenta otra especie, algtin otro caracter, como la mayor 6 menor anchura de los tarsos anteriores en los ¢’¢/ y la pun- tuacién hacen que 4 primera vista se reconozca como distinta y tipica. No hace falta para distinguirlas conocer la gruta en que viven, aun cuando exigen examen atento por lo compacto del c@énero y perfecta armonia de sus formas. Ya tengo dicho cémo B. Mazarredoi y B. Crotchi pueden formar indistintamente dentro de los grupos @ y aa y cémo es completamente arbi- traria la tal separacién en grupos, sirviendo sdlo para su mas facil conocimiento faltando los tipos. (45) Escalera.— EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI®». 407 Yo hubiera deseado acompaniar este estudio de los dibujos de antenas y tarsos y contorno del cuerpo de cada una de las especies del género, pues la sola descripcion es a veces enga- nosa por la dificultad de dar exactamente con la frase descrip- tiva; a falta de ello he procurado emplear los mismos térmi- nos, a riesgo de ser mondtono, en la descripcidn de las especies. 4.*. En grutas distintas al parecer en cuanto a sus condicio- nes se repite una misma especie sola 6 acompanada de otra que la sustituye mas lejos 6 que desaparece para dejar lugar a otra tercera que reemplaza a ambas en otra gruta. Por el contrario, en grutas parecidas y contiguas viven es- pecies diferentes. En medio de esta mezcla y sustitucidn de unas especies por otras, nunca aparecen en la misma gruta dos especies afines; cuando cohabitan dos 6 mas, estan tan alejadas cuanto lo permite la uniformidad de las especies en geéneros tan com- pactos como el género Bathyscia. Mientras unas especies estan muy extendidas y son muy numerosos sus individuos, otras, por el contrario, ocupan una sola gruta y en muy corto niimero; estas especies tie- nen caracteres mas salientes, 6 por mejor decir ligan las for- mas de unas regiones con las de otras: asi B. Crotchi y Maza- rredoi, rarvas y con estrias transversales al par que con antenas relativamente cortas, sirven de unidn a las formas pirenaicas, donde predominan las arrugas transversas y antenas largas, con las formas cantabricas sin arrugas transversas y antenas cortas proporcionalmente; asi también B. fi/icornis, extrema— damente rara, si pertenece al grupo de las B. triangulum, Seeboldi y arcana, por sus antenas finas y largas, recuerda en el aspecto general, rechoncho y corto, a B. cantabrica y Sharpr. 5." Viven las especies del género Bathyscia lo mismo en las partes mas cercanas 4 la entrada de las grutas en que se en- cuentran, como en lo mas profundo de ellas; pero en regla ge- neral prefieren los anchurones 0 saletas a los coladores y ga- lerias. Tienen predileccién por las partes de las grutas con mediana humedad, donde se ven detritus, y muy raramente donde la costra caliza esta al descubierto y lavada. Prefieren las pequenas depresiones del terreno por ser don- 408 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (46) de la arcilla 6 humus tienen un grado de humedad conve- niente; donde hay trozos de madera y hojas que se deshacen al tacto y bajo los trozos caidos de estalactitas, hay seguridad de encontrarlas cuando existen en la gruta; huyen del exceso de humedad, asi lejos de buscarlas al lado de los charcos, de- ben buscarse preferentemente alli donde el suelo abandonado por las aguas presenta resquebrajaduras sin que esté pulveru- lento por exceso de sequedad, esto es, donde la arcilla esta untuosa sin ser barro. Sin embargo de todo ello, en grutas donde parece que no pueden vivir se encuentran; asi B. filicornis vive en una gruta pequena y seca donde no hay obscuridad completa, y B. Boli- vari en otra en que el suelo esta completamente cubierto por la capa cristalina completamente seca en la época en que la visité y sin vestigios terrosos ni detritus de ningun género. Suelen estar reunidas en pequenos grupos y en parajes cir- cunscritos; asi en una gruta extensa después de pesquisas largas é infructuosas es frecuente dar con un pequeno espa- cio de tres 6 cuatro metros cuadrados donde hay gran cantidad de individuos y sin que al parecer el terreno desentone de los alrededores y en condiciones 4 veces peores que los que ofre- cen otros lugares de la gruta donde no se encuentran absolu- tamente. Muchas veces es preciso levantar todos los trozos caidos de estalactitas y hacer la misma caza que a los carabidos; otras corren de un lado para otro en cantidades enormes sobre el suelo. Cuando en una gruta viven dos especies diferentes, encuén- traselas reunidas sin que una ni otra muestre predileccién por uno u otro lugar de ella: B. arcana y Sharpi, en la de Suan- ces; B. autumnalis y Sharpi, en la de Puente Viesgo; B. trian- gulum y Perezi, en la de El Mazo, estan bajo una misma esta— lactita 6 corriendo sobre el suelo confundidas. Las generaciones deben sucederse sin interrupcién, por lo menos yo he encontrado Bathyscia en los meses de Mayo, Ju- nio, Julio, Agosto, Septiembre, Octubre y Noviembre, y en la misma gruta he cazado B. ¢ropica en mediados de Junio y en Noviembre en la Sima del Aigua, cerca de Carcagente. 6." En todos los casos, las Bathyscia, al ser sorprendidas, huyen y se dan perfecta cuenta del peligro que les amenaza, 47) +Escaleran—rEXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI&». 409 y sin vacilaciones se dirigen al punto que creen de refugio, cambiando de ruta tan pronto como se les intercepta el paso; la luz de la bujia les molesta extraordinariamente, y lo prime- ro que hacen cuando se levanta un trozo de estalactita, si hay algunas que quedan adosadas a la cara que estaba contra el suelo, es dar la vuelta rapidamente buscando la parte de la estalactita que no es herida por la luz, y esto cuantas veces se haga la prueba, si en el interin no encuentran alguna fisura 6 escondrijo en el trozo calizo 6 no se han dejado caer al suelo. Tienen gran habilidad para ocultarse y son velocisimas; asi es frecuente no poder coger mas de dos 6 tres ejemplares de ocho 6 diez que aparecen al levantar lo que las protege, tan deprisa huyen en todas direcciones y tan pronto encuentran donde hacerse invisibles aun donde mas terso y limpio apa- rece el suelo; bastales la impresién en el terreno de un trozo de estalactita ya levantado para quedarse agazapadas en ella; entonces si que no hacen caso de la luz, pero es porque se creen mas seguras estando inmdviles; buena prueba es que alejandose algo 6 teniendo paciencia se las ve salir rapida- mente de su guarida momentanea cuando creen pasado el pe- ligro, fiando a su ligereza el llegar a refugio mas seguro. El como a pesar de su ceguedad tienen perfecto conoci- miento de lo que las rodea, no sabré explicarlo; pero ello es que estas especies ciegas no necesitan del érgano de la vision para percibir las sensaciones; hallanse, al parecer, dotadas de medios de percepcién tan perfectos como los que poseen las especies de otros 'géneros provistos de ojos; comportanse en igualdad de circunstancias como las Cholevas y los Catops. 410 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (48) APEHENDICEH. Grutas visitadas por mi para la redaccion de este trabajo. Santander. Puente Viesgo.—Cueva del Casti/io 4 un cuarto de hora de los Banos. Puente de Arce.—Cueva de Pejas Negras 4 media hora del pueblo. Viérnoles.—Cueva de /uan Bueno a dos horas del pueblo en la falda de Pena Dobra. Hijas.—Dos cuevas sin nombre. Udias.—Cueva de Udias a tres cuartos de hora del pueblo. Golbardo.—Cueva de la Pefia & un cuarto dé hora del pueblo. Ungayo.—Cueva de las Brujas al lado del pueblo. Suances.—Cueva de las Brujas, distinta de la anterior y proxima 4 ella. Suances.— Sima sin nombre al lado de la ria. Cudén.—Sima del Hspino a una hora del pueblo. Cudén.—Sima de las Brujas, cerca de la anterior. Requejada.— Cueva sin nombre @ un cuarto de hora del pueblo. Bejes.—Cueva del Rodrigo 4 una y media hora de la Her- mida. Lebeiia.—Cueva Lubriga 4 dos horas del pueblo. Asturias. Panes.—Cueva Loja en el caserio El Mazo. Panes.—Cueva de la Peaa de Panes 6 de la Cabaiuca & una y media hora del pueblo. Abandames.—Cueva de Suprevide 4 una hora de Panes. Nota. En las subrayadas encontré Bathyscia. (49) Escalera.— EXAMEN DEL GRUPO «BATHYSCI&». 411 Provincias Vascongadas. Bilbao.—Cueva de San Rogue en Utzcorta a un cuarto de hora de la Ermita. Santurce.—Cueva sin nombre en el monte de Serantes 4 un cuarto de hora del fortin. Lequeitio.—Cueva del Calvario, cerca del Cementerio. Lequeitio.—Cueva de Achurra a 4 km. en la carretera a Marquina. Mondragén.—Cueva de San Valerio 4 media hora del pueblo. Onate.—Cueva de San Elias, camino de Aranzazu. Onate.—Cueva de Cisquirri 6 Aisquirri, cerca de la anterior. Onate.—Cueva de /guilegui, poco antes del Convento, al borde del rio. Orduna.—Cueva de la Embajada a una y media hora del pueblo. Orduna.—Cueva de A/dia, no lejos de la anterior, en el alto. Liodio.—Cueva sin nombre a una hora del pueblo. Zuazo a Orduna.—Cueva del Espino 4 una hora de Ar- chua. Zuazo 4 Orduna.—Cueva de la fuente de Urieta 4 una hora de la anterior. Zuazo 4 Orduna.—Cueva del Campillo de Santiago, proxima a la anterior. Zuazo 4 Orduna.—Cueva de los Patiles 4 media hora de la anterior en un monte de hayas. Alsasua.—Cueva de Orobe 4 una hora del pueblo. Alsasua.—Cueva sin nombre al lado de la carretera. Aragon y Cataluia. Fanlo (Huesca).—Cuevd sin nombre en el barranco de Pardi- na a media hora al N. del pueblo. Fanlo (Huesca).—Cueva sin nombre 4 una hora rio abajo al lado del molino. Montserrat.—Cueva de Montserrat al lado de Collbato. Piedra 4 Gallocanta.—Cubel.—Cueva sin nombre a 3 km. del pueblo. Piedra 4 Gallocanta.—Ibdes.—Cueva sin nombre 4 media hora del pueblo. 412 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (50) Castilla. Torrelaguna.—Cueva del Reguerillo, cerca del Pontén de la Oliva. Gongosto.—Dos cuevas sin nombre a la mitad del camino a Congostrina. Muriel.—Cueva sin nombre 4 media hora del pueblo, a ori- llas del Sorbe. Lozoya.—Cueva sin nombre a tres cuartos de hora del pueblo. Madrid.—Cueva del Canal 6 de la Magdalena. Valencia y Murcia. Carcagente.—Cova de las Maravillas 4 tres cuartos de hora del pueblo al SE. Carcagente.—Sima del A7gva a tres horas al S. en la Sierra de Valldigna. Carcagente.—Cova del Seguret, cerca de la anterior, es un socavon. Carcagente.—Cova del Llidoner, es sélo un socavon. Fuente de la Higuera.—Cova Santa 4 media hora al O. del pueblo. Vallada.—Cueva sin nombre 4 dos horas al SO., de entrada estrechisima. Bocairente.—Cova del Encomat 4 una y media horas del pueblo en Mariola. Bocairente.—Cova del Seguret 4 media hora de la anterior. Villena.—Cova de les Dones 4 una hora al E. del pueblo. Alcoy.—Cova de San Elias en la falda de Mariola. Alcoy.—Otra sin nombre en Mariola. Molinicos.—Cueva del Brusco a 3 km. al O. Molinicos.—Cueva del Mortero, cerca de la anterior, es sdélo un socavon. Molinicos.—Cueva de la Encantada 45 km. al NO. Molinicos.—Otra pequena sin nombre al lado de la anterior. Molinicos.—Cueva del Cortés. El Pardal.—Cueva de la Gitana 4 6 km. del pueblo, es un socavon, La Ossa de Montiel.—Cueva de Montesinos. Total de cuevas visitadas, 64. Encontré Bathyscia en 24. ESTUDIOS PRELIMINARES PARA LA FLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES, POR Da MAT Cw LO. RIV A Si NMEACE E.©)S:. (Sesion del 9 de Abril de 1896.) (Continuacion) (1). ORDEN GENCIANIDAS. FamitiA Gencianaceas. Menyanthes trifoliata L.=Treébol de vio, trébol de olov.— Muy comtn en las cuencas del Tajo, rio Salor y en los arroyos des- prendidos de la Sierra de Gredos. La infusion hecha con las hojas se considera por el vulgo como excelente febrifugo. Flo- rece en Abril. Gentiana nivalis L.— Abunda en toda la sierra de Béjar (Ve- nerofrio, Canalizo, Rodriga, Trampal. Fl. Julio, Agosto. G. verna L.—Crece, aunque muy escasa, en el Valle de Pla- sencia y montes de Gredos. Fl. Septiembre, Noviembre. G. acaulis L.—Habita en los picachos de la sierra de Gredos. Fl. Agosto, Septiembre. G. Pueumonanthe L.—Crece en los montes de las sierras de Gata, Béjar y Gredos, y bajo de Gredos. Fl. Agosto. G. lutea L.=Genciana, Amargon.—Solo hemos podido encon- trar esta especie en las sierras de Gredos y Béjar (Tejadillo). No debe ser muy escasa cuando los pastores se sirven siempre de la raiz para combatir las fiebres intermitentes. Fl. Agosto. Chlora perfoliata L..—Muy comun en la mayor parte de la provincia. Fl. Abril, Junio. Ch. imperfoliata L.—Crece en la Isla y Valle de Plasencia, alrededores de Serradilla y Caceres. Fl. Abril, Junio. Cicendia filiformis Delarbr.—El Sr. Rivas y Santos dice haber (1) Véase el tomo xxvi, pag. 177; xxvir, 229; y xxv, 149. 414 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (174) encontrado esta especie en la Cordillera central de San Pablo. Nosotros la hemos recogido en Gredos. Fl. Julio, Agosto. Erythrea spicata Pers.—Crece en los prados y montes de la Cordillera central de San Pablo y sierra de Gredos. Fl. Agosto. E. pulchella Horn.—Crece en la parte baja de las sierras de Guadalupe y Gata. Fl. Junio, Agosto. E. latifolia Sm.—Habita en los montes carpetanos y Cordi- llera central de San Pablo. Fl. Mayo, Agosto. E. linarifolia Pers.—Se encuentra en la parte alta de las sie- rras de San Vicente y Guadalupe. FI. Julio. EB. Barrelievi Duf.—Especie muy comun en los terrenos este- parios de Caceres, Virgen de la Montana, cerros de las minas de fosfatos y alrededores de la laguna de Trujillo. Fl. Julio, Agosto. E. Centaurium Pers.—Hiel de la tierra, Amargon.—Crece con mucha abundancia en los prados y montes de toda la provin- cia. El cocimiento hecho con la sumidad florida lo usa el vulgo como ténico y febrifugo. Fl. Mayo, Agosto. ORDEN GESNERIDAS. FamitiA Orobancaceas. Phelipea cerulea A. Mey.—Comiun en Serradilla, Plasencia, donde vive parasita sobre las raices del Piorno, Habas, Na- ranjo, etc. Fl. Abril, Mayo. Ph. cesia Reut.—En las praderas de Caceres, viviendo para- sita sobre el rizoma del /uico. Fl. Mayo. Ph. vamosa A. Mey.—Suele encontrarse con preferencia sobre las raices del Ulex europea. Cordillera central de San Pablo. Fl. Junio. Ph. avenaria Walp.—La hemos encontrado parasita sobre las raices del Dipsacus sylvestvis en Serradilla. Fl. Junio. Ceratocalys macrolepis Coss.—Vaquillones.—Muy comin so- bre el Romero, Jara, Madronera y Oxyris alba. Serradilla, La Jara, Plasencia, Cordillera central de San Pablo. Fl. Abril, Junio. C. fimbriata Lge.—Sobre el Oryris alba en la sierra de Arenal Gordo. Fl. Marzo. Orobanche reticulata Walby.—Hemos encontrado esta especie sobre la Jara y Torvisco, en Serradilla. Fl. Junio. ——— (175) Rivas Mateos.—FrLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 415 O. Rapum Thuill.—La hemos visto sobre Hrica Carnea, Ma- dronera, Lentisco y Carquesia. Valle de Plasencia. Fl. Junio. O. cruenta Bertol.—=Vaquillones.—Vive sobre la Madronera, Retama, Cantueso, etc. Serradilla, Caceres, Plasencia y otros sitios. Fl. Mayo. O. Galii Vauch.—Se encuentra sobre varias especies del gé- nero Galium: G. verum, G. Pedemontanum, etc. Serradilla. Flo- rece en Mayo. O. Hedere Dubi.—Vive sobre la Hiedra comun. Orinal de la Virgen, Virgen de la Montana. Fl. Junio. 0. Castellana Reut.—Nosotros hemos tenido ocasién de reco- ger esta especie sobre la Digitalis Thapsi y D. purpurea, con- firmando de este modo las indicaciones dadas por Reuter. Valle de Plasencia. Fl. Julio. FamitiA Globulariaceas. Globularia cordifolia L.—Yerba negra.—Comin en el puerto de Madrigal (Gredos), alto de la sierra del Barrao (Pasarén). FI. Julio. G. nudicaulis L.=Verba cardenilla.—En el Valle de Plasen- cia, Bazagona, Madronillo de Serradilla. Fl. Abril, Junio. G. vulgaris L.=Globularia.—En los campos contiguos 4 Tor- navacas, Jerte, campos de San Blas (Caceres), La Gamera de Serradilla. Fl. Julio. G. Alypum L.=Globularia cardenilla.—Muy comin en los montes y vallecitos de la sierra de Béjar, Valle de Plasencia, Bazagona, Montehermoso (sierra de Gata). Fl. Mayo, Julio. Famitia Utriculariaceas. Pinguicula vulgaris L.—Crece en la sierra de Gredos, buscan- do con preferencia los picachos (alto de Madrigal). Aunque para la flora que enumeramos no nos interesa, diremos que la hemos visto subir en la misma sierra hasta los 3.101 m. (Avila). Flo- rece en Julio. Utricularia vulgaris L.—Se encuentra entre los charcos pro- ximos al nacimiento del Jertes. Es muy probable se encuentre también en las sierras de Gredos y Gata. Fl. Agosto. 416 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (176) SERIE DIPLOSTEMONA. ORDEN ERICIDAS. FAMILIA Ericaceas. Arbutus Unedo L.= Madronera.— Abundante en toda la Ex- tremadura y en toda su region central, donde pueden obser- varse individuos que alcanzan una altura de 5 y 6 m. (Berbe- gones, Tajo). Fl. Invierno y Otono. Arctostaphylos Uva-Ursi Spr.= Gallia, gayuba.—Especie de las montanas septentrionales, en donde cubre partes de terre- no con sus ramas tumbadas (Gata, Gredos). Comtin en las riberas del Tajo y Monte. Fl. Mayo, Julio. Rhododendron ferrugineum L.=Madronera menor, madronera angosta.—Nombres vulgares que dan a@ esta especie rarisima los pastores de Gredos, sitio donde se encuentra en ejemplares escasos y aislados (Hermanitas). Es, por consecuencia, especie de interés desde el momento que baja de la region septentrio- nal ibérica hasta la central, en donde existe 4 2.300 m. Fl. Julio. Erica ciliaris L.—Especie cuya presencia se reduce a unos cuantos ejemplares en la sierra de Gata y altos de Monteher- moso. Fl. Julio, Septiembre. EF. Tetralic L.—Otra especie rara en la provincia; sdlo hemos podido recogerla en el matorral politipico que cubre la sierra del Piornal. Florece cuando la anterior 6 atin mas variable. EF. scoparia ..==Brezo, Queruela.—Extendida desde la parte septentrional, donde abunda (Gata, Hervas, Piornal, Valle de Plasencia), llega a la sierra de la Gibe para internarse en Por- tugal. Es comuin también en lasierra de Guadalupe. Fl. Junio. FE. arborea ..—Brezo blanco, Queruela blanca.—\Lo mismo se la encuentra en terrenos secos que humedos. Sierras septen- trionales, Cordillera central de San Pablo, sierras de San Pedro, Guadalupe y Montanchez. Donde mas crecida la hemos visto es en el hermosisimo soto del Orinal de la Virgen y Berbegones (Tajo), en donde alcanza una altura de 9 m. Fl. Marzo, Junio. EL. Lusitanica Rudolph.—Brezo, Queruela de la Sierra (Serra- dilla).— Donde mas abunda es en la cordillera oretana, San Vicente, Guadalupe, etc.; mas escasa en la de San Pablo y montes de la Virgen del Puerto (Plasencia). Fl. Octubre. (177) Rivas Mateos.—FrLORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 417 EF. australis L.=—Brezo, Queruecla.—Especie que, aunque no abundante, tiene representacidn en la mayor parte de los mon- tes caracenos. La hemos visto en la Virgen de la Montana (Caceres), sierra de Montanchez, Miravete, Valle de Plasencia, Gata, Cordillera central de San Pablo, etc. Fl. Marzo, Abril. Ff. carnea DC.= Brezo, Querue/a.—Kn los mismos sitios que la anterior y mas abundante. Fl. Enero. £. vagans L.—Es rara; sdlo hemos podido observar algunos ejemplares en la sierra de Gata. Fl. Agosto. EF. umbellata L.=Brezo, Queruela.—Muy comin en las sierras de Serradilla, Zapata, Miravete, Montanchez, Plasencia, ete. Fl. Enero, Febrero. Calluna vulgaris Salish. Brezo, Queruelo.—Invade toda cla- se de terrenos, pudiéndose asegurar que no hay montes de importancia donde no exista esta especie. Florece todo el ano. Famitia Pirolaceas. Pyrola rotundifolia L.— En los montes de la parte alta de la Cordillera central de San Pablo, cerro del Calamoco, Gredos, Dios Padre y Gata. Fl. Junio, Agosto. P. chlorantha Swartz.—Habita en la falda N. del puerto de Madrigal (sierra de Gredos). Fl. Julio. FamitiA Monotropaceas. Monotropa Hyppopithys L.— Fn los montes de la parte alta de la sierra de Gredos, bajando hasta los 700 m. en los montes de la sierra del Piornal, donde es escasa. Fl. Julio. ORDEN MIRSINIDAS. Famitia Primulaceas. Primula elatiov Jacq.—¥En los vallecitos de las sierras de Guadalupe y Gredos. Fl. Marzo, Mayo. P. officinalis Jacq.—Habita en los bosques de la Cordillera central de San Pablo, sierra de Gredos y Valle de Plasencia. Fl. Mayo. ANALES DE HIST. NAT.—XXVIII. pai 418 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (78) Androsace Pyrenaica Lamk.—En la parte alta de los pica- chos de Gredos. Fl. Agosto. A. villosa \..—Crece en la sierra de Tejadilla, alrededores de Navalconcejo, Jerte. Fl. Junio. A. maxima LL.—Comiuin entre las mieses y en los prados de Caceres, Alcuescar, Trujillo y otros puntos. Fl. Mayo. Cyclamen vepandum Sibth.—En los vallecitos de la sierra de Zapata, parte baja de la sierra de Grecos. Fl. Enero, Abril. Asterolinum stellatum Link et Hoffm.—Comun en los campos de Serradilla, prados de la vega del estanque, Plasencia, Banos de Banos. Fl. Marzo, Mayo. Lysimachia Ephemerum U.—KEs frecuente en la Bazagona y Valle de Plasencia. Fl. Julio. L. culgaris L.=Pimpinillas.—Muy comin en los alrededores de Malpartida, Calzadilla de Coria, Serradilla, Casas de Millan y otros muchos puntos. Fl. Abril, Julio. L. nemorum L.= Pimpinilla menor.—Comun en los mismos sitios que la especie anterior y en la sierra de Gredos. FI. Junio. Coris Monspeliensis L..—Pelusilla purpurea de montgia.—Bas- tante abundante en la sierra de Gredos, Gata y Guadalupe. Fl. Abril, Agosto. Anagallis tenella L.-— Frecuente en los mantivos y arroyitos de la sierra de Gredos, alrededores de Caceres y en los cogollos del agua caliente de la garganta de Serradilla. Fl. Mayo, Agosto. A. linifolia L.—En los sitios himedos y sombrios de Plasen- cia, Bazagona. Fl. Marzo, Julio. A. cerulea Lamk et DC.—Especie muy comun, lo mismo en la region central que en la occidental. Fl. Abril, Junio. A. Phenicea Lamk.—Crece en la garganta de Serradilla, en todo el Valle de Plasencia; busca con preferencia la orilla de los arroyos. Fl. Abril, Agosto. Samolus Valerandi L.—Pajarilla de agua.—Crece en las ori- llas de los arroyos y parajes htiimedos del Valle de Plasencia, Orinal de la Virgen y Lance de la Mora. FI. Junio, Septiembre. FamitiA Plumbaginaceas. Armeria cespitosa Boiss —Exclusiva de la sierra de Gredos, y aun aqui es bastante escasa. Madrigal, Hermanitas. Fl. Agosto. (179) Rivas Mateos.—rbLoRA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 419 A. splendens Boiss.—E1] area de esta especie es un poco mas extensa que la de la anterior. Se encuentra en Gredos, Tras la Sierra y Piornal. Fl. Agosto. A. elongata Hoffm.—Bastante frecuente en la Cordillera cen- tral de San Pablo, Portilla de la Garganta, Cruz del Cancho. Fl. Junio. A. plantaginea Wild.—Ya indicada por Schousboe en Extre- madura. Nosotros la hemos recogido en la Virgen de la Mon- taha, de Caceres, camino de Monroy, rio Tozo y praderas de la Lucia. Fl. Julio. A. vestita Willk.—Se halla en Tornavacas y campos proxi- mos a Plasencia (Bourg). Bajo la fe de este botanico hacemos mencidn de la especie, pero hemos de indicar que en los sitios dichos no se ha encontrado hasta ahora por ninguno de nos- otros mas especies del género que la A. /ongearistata Boiss. et Reut. . A. longearistata B. et R.—Especie muy abundante en toda la parte septentrional, puerto de Tornavacas, Jerte, Plasencia, Valle de Plasencia y otros puntos. Fl. Junio, Julio. Statice echioides L.—Bastante frecuente en los barrancos y monies de la mayor parte de la provincia, Serradilla, Plasen- cia, Casas de Millan. Fl. Junio. St. dichotoma Cav.—Especie muy comin en los alrededores de Caceres, Trujillo. Fl. Junio. Plumbago Europea U.=Palomillos de agua.—'n los montes y praderas de Serradilla, Casas de Millan, Hinojal, Talavan. Flo- rece en Mayo, Agosto. GAMOPETALAS INFEROVABIEAS. ORDEN CAMPANULIDAS. Famitia Campanulaceas. Jasione blepharodon B. et R.—Crece en los campos proximos a la Virgen de Tiebas (Casas de Millan). Fl. Abril, Mayo. J. montana L.—Muy comin en toda la Cordillera central de San Pablo, sierra de Montanchez y Guadalupe. Fl. Mayo, Sep- tiembre. 420 ANALES DE HISTORIA NA'TURAL. (180) J. humilis Lois. —Comun en los alrededores del castillo de Mirabel, en el Valle de Plasencia y Bazagona. FI. Junio, Julio. J. amethystina Lag.—Crece en los picachos de la sierra de Gredos, puerto de Tornavacas y sierra de Gata. Fl. Junio, Julio. J. perennis Lamk.—En las cumbres y generalmente entre los pizarrales de la sierra de Gata y Gredos; desciende hasta los 904 m. en la sierra de Guadalupe. Fl. Julio, Agosto. Phyteuma spicatum L.—Crece en la parte alta de la sierra de Tejadilla, en los pizarrales de Tornavacas y en la sierra de (rredos. Fl. Julio. Specularia Speculum Alph.—Crece entre los sembrados y de- mas terrenos cultivados, Caceres, Plasencia, Trujillo, etc. Flo- rece Abril, Mayo. S. hybrida Alph.—Tan comin 6mas que la anterior especie, habitando como ella en terrenos himedos y cultivados. Florece en Marzo, Mayo. S. falcata A\lph.—Campanula falcata Roem.—El Sr. Rivas y Santos dice haberla recogido en la sierra de Zapata; nosotros no hemos podido hacer la comprobacién. Fl. Abril, Mayo, S. Castellana Lge.—Crece en las inmediaciones del castillo de Mirabel, Virgen de la Montana en Caceres, puerto de Mira- vete, etc. Fl. Mayo, Agosto. Campanula Brinus U.—Crece en los alrededores de Serradi- lla, Caceres, Plasencia, etc. Fl. Marzo, Julio. C. Trachelium L.—Habita en la parte baja de la sierra de San Vicente, campos de Herreruela y Navas del Madrono. Fl. Mayo, Agosto. C. latifolia L.—Habita en los matorrales y bosques de la Ba- zagona, soto de los Berbegones y Lance de la Mora (Tajo). Flo- rece en Junio. C(. Hispanica Willk.—En el Valle de Plasencia, sierra de (iredos, Guadalupe y en la Cordillera central de San Pablo. Fl. Junio, Agosto C. rotundifolia L..—Muy comin en toda la provincia, lo mis- mo en la regién central que en la occidental. Fl. Mayo, Julio. CO. Herminii Link et Hoffm.—Sierra del Villar, Hervaés y Gata; sube hasta los 2.424 m. en la de Gredos. Fl. Junio, Agosto. C. Rapunculus L.=Pajaritas.—Comiun en los montes y valle- citos de la sierra de Gredos y Gata; mas frecuente en toda la (81) Rivas Mateos.—1LokA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 421 Cordillera central de San Pablo y sierra de Guadalupe y Mon- tanchez. Fl. Abril, Junio. C. patula L.—Tan frecuente 6 mas que la anterior especie, buscando con preferencia parajes htimedos y encharcados. Flo- rece en Mayo, Julio. C. decumbens Alph.—Crece en las inmediaciones de Serradi- lla (prado de la Zaurda). Fl. Mayo, Junio. C. Leflingii Brot.—De esta especie tan polimorfa como abun- dante, puede decirse que se halla lo mismo en la parte baja, donde la altitud no sube de 100 m., hasta en las altas cumbres de Gredos y Gata, ofreciendo, por consecuencia, multiples y variadas formas que ligan con regular progresién las tres va- riedades que Lange establecié bajo los nombres de « occidenta- lis, 3 matritensis y y filiformis. Fl. Mayo, Septiembre. C. fastigiata Duf.—El Sr. Rivas y Santos ha recogido esta especie en las praderas de la Gamera (Serradilla). Fl. Mayo. Wahlembergia hederacea Rchb.—K1 Sr. Santurino y Mateos ha recogido esta especie en los cogollos de la garganta de Serra- dilla. Nosotros la hemos visto en los arroyos de la sierra de Gredos, Valle de Plasencia y Caceres. Fl. Junio, Septiembre. FamitiA Lobeliaceas. Lobelia urens L.=Mata caballos.—Especie muy comin en los parajes humedos de la mayor parte de la provincia. Fl. Mayo, Julio. FAMILIA Vacciniaceas. Vaccinium Myrtillus L..—Arandano.—Crece en los montes de la sierra de Gredos, Gata, y baja hasta los montes de la Cordi- llera central de San Pablo (castillo de Monfragiie). Fl. Abril, Junio. Faminia Cucurbitaceas. bryonia dioica Jacg.—Brionia, Uoas de lagarto, Parra zarza- lera.—Muy comiin en los setos y malezas de toda la provincia. La raiz suelen usarla como emética, habiendo ocurrido casos de intoxicacién por forzar dosis. Fl. Abril, Julio. 422 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (182): Ecbalium Elaterium Rich.—=Pepinos de lagarto, Melonera det diablo, Cohombrillo amargo, Sustones, Planta escopetera, ete.— Muy comin en toda la provincia, habitando con preferencia en los barbechos y al lado de las paredes de las callejas y muros viejos. La raiz goza de buena fama como purgante, asi como también el fruto. Lagenaria vulgaris Ser.=Calabaca vinatera, Calabaza de los peregrinos.—Especie tropical que, debido a la frecuencia de su cultivo, crece subespontanea en los sotos y rios, Bazagona y Portilla (Tietar), Berbegones y Lance de la Mora (Tajo). Flore- ce en Mayo. : ORDEN RUBIDAS. Famitia Rubiaceas. Rubia tinctorum L.—Rubia.—En los montes de la Cordillera central de San Pablo, Valle de Plasencia, soto del Orinal de la Virgen y Lance de la Mora. Fl. Abril, Julio. R. peregrina L..=Rubia.—Muy comun en las huertas de na- ranjos de Serradilla, campos y matorrales de Plasencia, Hoyos, Canaveral, Caceres, ete. Fl. Abril, Junio. Galium cruciata Scop.— Crece en los parajes humedos del Valle de Plasencia, Gredos, Guadalupe, etc. Fl. Abril. G. vernum Scop.—-Tanto la var. 2 Bauhini DC. como la 8 Ha- llevi DC. son comunes en el Valle de Plasencia, Serradilla, Hoyos y otros puntos de la provincia. Fl. Mayo. G. Pedemontanum A\l.—En el soto del Lance de la Mora, Valle de Plasencia y sierra de Gata. Fl. Mayo, Julio. G. rotundifolium L.— Montes de las sierras de Guadalupe, Montanchez, Gredos, Gata y Cordillera central de San Pablo. Fl. Mayo, Julio. G. ellipticum Wild.—Indicada como muy rara en los campos proximos 4 Plasencia, segin Burgeau. Nosotros la hemos re- cogido en los montes de la sierra de Hervas. Fl. Junio. G. Broterianum B. et R.—Montes de la Cordillera central de San Pablo y en la sierra de Gredos (Madrigal y Hermanitas). Fl. Mayo, Julio. G. Mollugo L..—Crece en la mayor parte de la provincia, lo mismo septentrional y central como meridional. Fl. Junio. (83) Rivas Mateos.—rLoRA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 423 G. fruticescens Cav.—Cordillera oretana y San Pablo, como también en la sierra de Gredos. Fl. Mayo. G. purpureum L.—No hemos visto de esta especie mas que un ejemplar, recogido por el Sr. Rivas y Santos en un arroyo de Serradilla (Madronillo). Fl. Junio. G. verum L.—Muy frecuente en toda la provincia, acrecen- tandose mas su abundancia en las cuencas del rio Tajo. Flo- rece en Junio, Agosto. G. rivulare B. et R.—Crece en la sierra de Gata y Gredos; baja hasta la parte meridional en la sierra de Guadalupe. Fl. Junio. G. uliginosum L..—Crece en los campos montuosos de Plasen- cia, Casas de Millan, Hoyos, etc. Fl. Junio, Agosto. G. setaceum L.—Muy comun entre las malezas de las cuen- cas del Tajo, soto de los Berbegones, Orinal de la Virgen y Lance de la Mora. Fl. Abril, Julio. G. divaricatum Lamk.— Habita en los campos de Caceres, Virgen de la Montana, Plasencia, Serradilla, etc. Fl. Junio. G. tenellum. Jord.—En los montes de la Cordillera central de San Pablo, Valle de Plasencia y sube hasta los 1.800 m. en la sierra de Gredos. FI. Julio. G. Parisiense l,..—Muy comtin en los campos de Serradilla, Casas de Millan, Villa Real de San Carlos, Torrejon el Rubio, Trujillo, Plasencia, Hoyos y Valle de Plasencia. Fl. Abril, Julio. G. Aparine L.=Agarrones, amor de hortelano.—Muy comin en las huertas, sembrados y setos de toda la provincia. Florece en Mayo, Agosto. G. tricorne With.=Agarrones, Amor de horlelano.—Tan co- min 6 mas que la anterior, habitando en los mismos sitios. Fl. Abril. G. murale All.=A sperula nutans Moeench.—Especie muy co- mun en toda la provincia, habiendo recogido ejemplares en las sierras de Gata y Gredos 4 una altitud de 2.115 m. Fl. Abril, Junio. Asperula arvensis L.=Agarrones de senorita. — Muy comun en los sembrados y demas terrenos de cultivo. Fl. Abril, Mayo. A. aristata L. (fil) —Comtn en toda la provincia, predomi- nando con preferencia en la regién central. Fl. Mayo, Julio. A. cynanchica L.—Habita en las cuencas del Tajo y Cordillera central de San Pablo, como igualmente en los alrededores de Caceres y Virgen del Puerto, en Plasencia. Fl. Junio, Agosto. 424 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (184) A. odorata ..—Crece en los montes de la parte alta de la Cordillera central de San Pablo y en la sierra de Dios Padre. Fl. Junio. Sherardia arvensis L.=Agarrones, Amor de hortelano.—Co- mun en toda la provincia. Fl. Febrero, Julio. Crucianella angustifolia L.—Crece en los alrededores de Villa Real de San Carlos, Serradilla, Caceres, Trujillo y otros puntos. Fl. Mayo, Junio. C. patula L..—Especie muy comin en toda la provincia, pre- dominando en la regién central. Fl. Abril, Mayo. C. latifolia L..—Crece en los campos préximos 4 Casas de Millan, Canaveral, Mirabel y Coria. Fl. Abril, Junio. Callipeltis Cucullaria DC.—KI Sr. Rivas y Santos ha recogido ejemplares en los alrededores de la Cruz del Cancho y mon- tes de la humbria. Nosotros la hemos visto en unos cerros proximos a Plasencia junto al caserio de la Herguijuela de Leal. Fl. Mayo, Junio. FamitiA Caprifoliaceas. Sambucus nigra L.—Satco.—Se encuentra espontanea en el soto de la Bazagona, junto al rio Tietar, Berbegones del Tajo y Orinal de la Virgen, soto del rio Salor (Herreruela), etc. Flo- rece en Mayo, Julio. S. Ebulus L..==Yezgo.—Muy comin en las orillas de los rios y arroyos, en los sotos antes indicados, El Marco (Caceres), Isla de Plasencia. Fl. Junio, Julio. Viburnum Tinus L.=Durillo, Orellano, Ovrillera.—¥Especie muy comun en los montes y sotos de la mayor parte de la pro- vincia, Serradilla, cuencas del Tajo, Tamuja, Salor, Jerte, ete.— Fl. Enero, Marzo. V. Lantana L.—Crece en los montes de la regién central, y de éstas en la de Gredos y Dios Padre; menos frecuente en la de Gata. Fl. Mayo, Julio. V. Opulus L.==Mundillos.—Menos frecuente que la especie anterior; se encuentra en las altas cumbres y junto a los arro- yos de la sierra de Gata y Gredos; rara en la de Guadalupe. Fl. Junio, Julio. Lonicera impleza Ait.—Crece en el Valle de Plasencia, en el (185) Rivas Mateos.—¥LORA DE LA PROVINCIA DE CACERES. 425 Derriscadero del rio Tajo (Serradilla), y en los montes de la sierra de Guadalupe. Fl. Abril, Mayo. L. Caprifolium L.=Madreselva. — Habita en los montes de Serradilla, Plasencia, Caceres, sierras de Guadalupe, Montan- chez y Gredos. Fl. Abril, Julio. L. Btrusca Santi.—=Madreselva.—Tan comin como la anterior especie; de preferencia en los sotos. Fl. Junio, Agosto. L. Periclymenum L.—Se encuentra en los montes de la Cor- dillera central de San Pablo; rara en las sierras meridionales; mas frecuente en Gredos y Valle de Plasencia. Fl. Mayo. L. Hispanica B. et R.=Madreselva.—Especie muy comin en toda la provincia, Serradilla, Casas de Millan, Bazagona, Tru- jillo, Caceres, Coria, Hoyos, etc. Fl. Junio, Julio. L. Xylosteum L.—Crece esta especie en los montes del Valle de Plasencia (Tornavacas), faldas de la sierra de Gata, Dios Padre y Gredos. Fl. Mayo, Junio. FAMILIA Valerianaceas. Valeriana officinalis L. —Valeriana.—Crece espontanea en los terrenos arcillosos y humedos de la Bazagona, sierra de Gua- dalupe, Valle de Plasencia y sierras de Gata y Gredos. Fl. Mayo, Julio. V. Phu L.=Valeriana.—Es menos frecuente que la anterior, encontrandose sélo espontanea en las altas sierras de la pro- vincia, Gata, Gredos y Guadalupe y picachos de la Cordillera central de San Pablo. Fl. Mayo, Julio. V. tripteris L..—Habita en las altas cumbres de la sierra de Gredos y baja hasta los 1.690 m. en el nacimiento del rio Jertes (Tornavacas). Fl. Junio, Agosto. V. dioica ..—Sierra de Dios Padre y Gredos. Fl. Marzo, Julio. V. tuberosa L..—Especie muy comun en la Cordillera central de San Pablo, Virgen de Tievas, Herguijuela de Guadalerma y montanas tanto septentrionales como meridionales. Fl. Mayo, Julio. Centranthus ruber DC.=Valeriana roja.—Habita entre los pe- hascos de la cumbre en la Cordillera central de San Pablo, sie- rra de Guadalupe, etc. Fl. Abril, Septiembre. C. Calcitrapa DC.—Especie comunisima en toda la provin— 426 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (186) cia, habitando en las praderas, campos de cultivo y barrancos no muy elevados. Fl. Abril, Mayo. Valerianella echinata DC.—Crece en los campos de Serradi- lla, Plasencia, Casas de Millan y en las vegas de la Bazagona (rio Tietar). Fl. Abril, Junio. V. truncata Bteke.—Habita en los alrededores de Torreque- mada, Trujillo, Caceres y en los montecitos de Villa Real de San Carlos. Fl. Mayo, Junio. V. eriocarpa Desv.—Se encuentra en las praderas de los cam- pos Aranuelos, vegas de Almonte y en los contornos del case- rio de la dehesa Mirabel (Tietar). Fl. Mayo. V.carinata Lois.—Comutn en los campos de Navalmoral de la Mata, Casatejada y Malpartida de Plasencia; escasa en la. regidn occidental. Fl. Mayo. V. coronata DC.—Muy comin en toda la provincia, predo- minando en los prados de Serradilla y Casas de Millan. Florece en Mayo, Junio. V. discoidea Lois. —Tan comin 6 mas que la anterior, y con especialidad en la region occidental, Herreruela, Aliseda. Flo- rece en Abril, Mayo. V. olitoria Poll.=Hierba de los canonigos.—Muy comin en toda la provincia, lo mismo en la regidn central que en la occi- dental. Fl. Marzo, Junio. Faminia Dipsaceas. Dipsacus sylvestris Dod.=Cardenchas, Orinal de lagartos, Pei- nes de lagartos.—Comitn en los arroyos, terrenos cultivados y praderas de toda la provincia. Fl. Junio, Agosto, D. laciniatus LL.— En los terrenos cultivados de cereales, en el Valle de Plasencia y Gredos, en donde la conocen con el nombre vulgar de A brepuios y Cardenchas. Fl. Julio, Agosto. D. ferog Lois.—La var. 8 ambiguus Lee. et Wk., en la sierre de Zapata. Fl. Julio. Cephalaria Syriaca Schrad.— 20 Dee er eR ne chins Ota Bane: c- 37: » 50 —— Y a propuesta del Sr. Urquia se acorddé dar un voto de gra- cias al Sr. Canal por su gestidn como Tesorero, sintiéndose por todos que las muchas ocupaciones del mencionado senor le impidan continuar desempenando el cargo. —Kl Sr. Barras envid la continuacién de sus «Datos para la florula sevillana. Fam. Rosaceas. Poterium muricatum Spach.—Dos Hermanas a Sevilla (Pau! ). — Mauritanicum Boiss. et R.—Sevilla; Dos Hermanas’ a Sevilla (Pau!). — dioicum Pau.—Dos Hermanas a Sevilla (Pau!). Rosa caning L.--Sevilla. — spinosissimda L., var. aurora H.—Sevilla. (Cult.) — gallica L.—Sevilla. (Cult.) — Sepium Th.—Sierra Morena. — sempervirens L.—Sevilla. — centifolia L.—sSevilla. (Cult.) — senmperflorens Curt.—Sevilla. (Cult.) Fragaria vesca L.—Sierra Morena. Rubus discolor W.—Sevilla; Alcala de Guadaira. — /hyrsoideus Witam.—Sevilla; Camas. — uamenus Port.—Sevilla. Potentilla reptans L.—Sevilla; Dehesa de Gascén, Marchena- — Ahirta \..—Mairena del Alcor. Fam. Pomaceas. - Pyrus communis V..—Sevilla, Norte de la provincia. 38 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Malus communis Lan.—Sevilla. (Cult.) Cydonia vulgaris P.—Sevilla. (Cult.) Mespilus Germanica L.—Penaflor; Constantina. Eriobotrya Japonica Lind|.—Sevilla. (Cult.) Crataegus Oxyacantha L.—San Juan de Aznalfarache. — mnonogynda Jacq.—Dehesa de Gascén, Marchena. Fam. Amigdalaceas. Amygdalus communis LL.—Sevilla. (Cult.) Prunus spinosa L.—Sevilla. (Cult.) Cerasus avium Moench.—Sevilla, Norte de la provincia. — Caproniana DC.—Sevilla. (Cult.) SECCION DE ZARAGOZA. Sesi6én del 30 de Noviembre de 41898. PRESIDENCIA DE DON BRUNO SOLANO. —Leida el acta de la anterior, fué aprobada. —Quedaron admitidos como socios de nimero el R. P. Estanislao Domenech §. J., presentado por el P. Navas, y D. José Pardo, presentado por el P. Navas, a nombre del Sr. Pau, y como socio agregado, D. Julian Llorente de Pablos, presentado por el Sr. Gila. —Fué presentado un socio de ntimero. —Se did lectura a la siguiente nota remitida por el senor Vicioso (de Calatayud). «Plantas del Moncayo. A mediados de Julio de 1893 visité por vez primera el Mon- cayo en compania de mi amigo el Licenciado en Ciencias don Cipriano Luis Aguilar, en cuya expedicién recogimos nume- rosas plantas cuyos nombres y los de muchas otras que viven en las inmediaciones de Calatayud, fueron publicados en nuestros ANALES en nota remitida por D. Carlos Pau. (Sesion del 4 de Julio de 1894.) Otra expedicién realicé en los primeros dias de Agosto del = DE HISTORIA NATURAL. 39 presente ano, acompanado esta vez por el R. P. Longinos Navas 8. J., y aunque mi principal objeto eran entonces los liquenes, no desdené, sin embargo, las fanerdgamas, recolec- tando un buen numero de especies que la vez anterior habian pasado inadvertidas. Tenia particular intercs en encontrar como mas curiosas y notables las siguientes especies que me fueron recomendadas por el Sr. Pau: Malva stipulacea Cav. (specie critica que espero hallar no lejos de aqui, pues se cita por Asso en Morés); Ranunculus Carpetanus B. R. (No lo vien la cumbre del Mon- cayo en donde lo cita el Sr. Wilkomin); S¢/ene geniculate Pourr.; Saxifraga paniculata Cav.; S. Willhommiana Boiss.; S. cespi- tosa Asso (1); Jasione fallax Wik.; Jasione humilis Lois.; Rumer anplexicaulis Lap.; Festuca levis Haekel; /. sulcata Haekel; Hieracium Willkommit Sch. (loc. class. et unicus) y el rari- simo Hieracium Vahlii ¥roel. Ademias el Sr. Gandoger me habia recomendado la recolec- cion de ejemplares de la Hrica tetraliz L. var. Assot Pau; pero me fué imposible proporcionarle un solo pie, porque habia desaparecido de las inmediaciones de la Fuente del Sacristan, donde la hallé por primera vez en 1893. También creo oportuno hacer constar que ha desaparecido igualmente de los pedre- gales que hay encima de la Fuente de San Gaudioso el Aconi- tum Lycoctonum L., recolectado anteriormente por mi en di- cho sitio. En la siguiente lista figuraran algunas plantas de la pri- mera expedicidn indicada y todas las de la segunda, ilustra- das algunas de ellas con interesantes notas del Sr. Pau y unas cuantas mas senaladas con un *, que me comunico al P. Na- vas, ahadidas por él en afos anteriores al herbario del Colegio del Salvador, dé Zaragoza. I. Dicotiledoneas. * Biscutella levigata L. var. hispidissima.— Cumbres del Mon- cayo. Viola Montcaunica Pau (V. cornuta L. y micrantha Lge.) (Vea- se Actas de la Soc. esp. de Hist. nat., sesidn del 4 de Julio 1894.) Consigno de nuevo esta planta para hacer constar que es fre- = ® (1) Véase mis adelante la nota del Sr. Pau sobre las Saz‘fragas. 4) ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA cuente junto alsantuario y que llega hasta la cumbre (2.315 m.)» Drosera rotundifolia L.—Junto a las aguas corrientes. * Polygala rosea Desf.—Mayo 95. Silene ciliata Pourr.—S. stellata Lap.—8 geniculata DC.— S. geniculata et S. Arvatica Lag.—Vrecuente junto al santuario. . Sagina apetala L.—Sitios htimedos contiguos al santuario. Slellaria media Will. forma.—Con la anterior. Cerastium arvense LL. forma humilior.—Frecuente entre el santuario y la cumbre. Dianthus Armeria L.—Carrascales. Genista Hispanica L..—Matorrales. Ononis minutissima LL.—Idem. Lotus uliginosus Sch.—Selvas. * Spireda Filipendula L.—Inmediaciones de Veruela. 18 Junio. 1895. Epilobium Tournefortit Mich.— Fuentes cerca del santuario. Montia rivularis Gm.—Lugares hiimedos. Paronychia argentea Lam.—Cerca de Veruela. Junio 1895. Sedum micranthum Bart. — hirsutum All. — amplezicaule DC.—Los tres no lejos del santuario. Sazifraga Willkhommiana B. et S. Willkhommiana B. forma humilis. El género Sazi/raga esta representado por alguna forma eri-- tica de varias maueras citada por los autores. «777. S. nervosa Lap. Abunda en Moncayo. Calavia. Abunda en las hendiduras de las rocas cerca del Santuario de Nuestra Senora del Moncayo. Wk.! Loscos y Pardo. Serie imp., p. 153.» «889. S. Pentadactylis Lap. Frecuente en el Moncayo junto al Santuario. Wk. Véase la Seve ntiim. 777. Loscos. Zratado, p. 64.» «Otras tres son las que he visto vivas en la provincia de Teruel, y son: S. Zridactylites, S. granulata y S. paniculata Cav. En cuanto 4 esta ultima, que realmente debe serlo, yo creo que pertenece toda ella (Serie nim. 776) a la §. Penta— dactylis Loscos ib., p. 63.» «A quelle plante faut-il appliquer le nom de S. Wil/kommia- nua Boiss?... Cette plante est la méme que j’ai recoltée sur les. cimes de Moncayo en Aragon. Leresche. Deva Fxe., p. 190.» Di HISTORIA NATURAL. 4} «3180. S. Pentadaclylis Lap... 8. de Moncayo juxta sanctua- Tum ap. Wk et Lee. Prods. ; 1, p:ll2:> «3180. Savifraga Pentadactylis. Observ. Planta hispanica sub hoc nomine enumerata non est species Laperousiana, sed dis- tincta, nempe: S. Willkommiana Boiss. hb. inedit. (S. exarala, 8 nervosa Wk. pl. exs. 1850, num. 324b. S. nervosa Willk., Sert. fil. hisp., p. 56 non Lap. 8. exarata var. nervosa Engl. 1. e. 186! ex parte Willk. Suppl., p. 208).» «Observ. Beat. Loscos (Frat. pl. Arag., 11, pag. 65) suspicatur S. paniculatam Cav. identicam esse cum 8. Willkommiana (sal- tem cum planta montis Moncayo) Willk. ib., p. 209.» Kn el Moncayo existen tres formas muy afines. La una sc encuentra en las «hendiduras de las rocas inmediatas al san- tuario, 1.620 m., 4 Agosto 1898». B. Vicioso in sched. Esta per- tenece realmente a la S. [Vil/kommiana Boiss. y no a otra. La segunda forma se encuentra «desde las inmediaciones de la tercera nevera hasta la cumbre, 1.800 a 2.315 m., 5 Agosto 1898». B. Vicioso in sch. Esta corresponde a la §. Ii//kommia- na Leresche, porque dice: «recoltée sur les climes de Moncayo». La diferencia de altitud produce wnicamente! ligeras diver- gencias que a primera vista parecen muy diferentes por la exagerada longitud de algunos tallos de la primera forma, cuando la segunda es humilde y mas reducida en todos sus or@anos. Esto explica el por qué cierto viajero cita de aqui las S. pa- niculata y S. Willkommiana, no encontrandose de ninguna manera en el Moncayo el tipo de Cavanilles. La tercera forma procede de Aranda y es la mas diversa de las citadas. Este vegetal parece una forma reducida de la S. Camposii B. R. por sus hojas dilatadas y bracteas del escapo enteras. Pudiera explicar esta variedad el motivo de llevar el difunto Willkomm a la 8. Camposii B. R. la S. Willkommiana. si, como es probable, conocid esta forma. Seetin lo expuesto y apoyado en los veinte ejemplares de localidades diferentes que poseo en mi coleccidn de la seccién Ceratophylle, inicamente se pueden distinguir con segurida: como tipos las 8. paniculata Cav. y la S. trifurcata Schrad. Las restantes son sub-especies, variedades 6 formas de las indica— Y masaun, vi dos tipos diversos son!: todas pertenecen a 42 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA un solo tipo linneano 6 de primer grado. Las formas de la sec- cién Ceratophylle todas perlenecen « especies diversas! in medio de este grupo polimorfo se encuentra la S. Penla- dactylis Lap., que con dificultad puede distinguirse de la S. Willkhommiana Boiss. (e loco Willkommii!). Yo la creo real- mente como S. Pentadactylis Lap. por no descubrir diferencias apreciables. También se daen Jabalambre otra forma parecida a ésta y que se publicéd bajo el nombre de S. Valentina Wk.!, que no existe en Valencia, y que si se pretende considerarla como autdnoma, es preciso cambiar de nombre: yo no la tengo mas que por variedad de la §. paniculata Cay.! (e loco Morelia). Resumiendo lo dicho, las especies de esta seccién pudieran clasificarse del siguiente modo: + Hojas terminadas en arista 6 mucronadas. S. tifurcata Schrad. Limbo foliar 2-3 cortado: lacinias lineales. 8. canalicuta (B. R. sub sp.). Peciolos plegados: lacinias mas angostas. S. cuncala W. Sec. disc. (excl. locum Castellfort!). Hojas con lObulos aovados anchos, bruscamente cuneiformes, 3-5 ldbulos. Si no fuera por sus hojas mucronadas pareceria mas bien va- riedad /atifolia de la §. paniculata Cav. La planta de Castellfort, pueblecillo prodximo a Morella, sa- liendo en direccién a Ares, es la verdadera S. paniculata Cav. y no §. cuneata Wk. S. Camposii B. R. Hojas largamente adelgazadas en peciolo: 3-5-fido: lobulos anchamente lineales, aguzados. + -+- Lacinias foliares redondeadas en el apice y obtusas. S. paniculata Cav. (1. class.). Hojas tripartidas, particiones enteras, bifidas 6 trifidas. 3. Jabalambrensis.—S. Valentina Wik.! (locus unicus). Planta mas g@racil: lacinias foliares mas angostas: inflorescencia g@e- neralmente g@landulosa. S. Pentadactylis Lap. (sec. auct. pyr.!).—S. Willkommiana Boiss. (e loco ips.). Lacinias lineales siempre tripartidas, par- ticiones una de las laterales bifida, rara vez son bifidas las dos laterales: la central siempre es integra. B. latifolia.—Uojas parecidas a las de la S. Camposii B. R. (Aranda. B. Vicioso.) DE HISTORIA NATURAL. i3 La S. obtusifida Don. pertenece a este Ultimo grupo y pro- bablemente a la S. paniculata Cav. Bupleurum rigidum L.—Carrascales y rebollares. Laserpitium latifolium L. 8 asperuwm.—Rebollares. Ligusticum Pyrenaicum Gou.—A pocos pasos del santuario. Lonicera Ftrusca Santi.—Selvas. Galium Cruciata Scop.—Selvas. — sylvestve Poll.—Junto al santuario. Centaurea amara \..—Carrascales entre Veruela y el Moncayo. — linifolia Vahl.—Idem. Tnula helenioides DC. 8. adenactis—Vinas inmediatas a Vce- ruela. Leucanthemum corymbosum Gr. Godr.—Carrascales y rebo- Ilares. Lapsana communis L.—Carrascales y rebollares. Crepis fetida L.—Carrascales. Hieracium Vahlii Froel.—Sitios arenosos. No hallado en el Moncayo mas que por Willkomm (Pau in litt.). Willkomm lo cita en otras partes de Aragon sin especificarlas. TTieracium Castellanum B. R. « pilosum Sch., forma bicepha/t. Junto a la carretera, en las inmediaciones del santuario. «Huy creo que el //. Castellanum B. R. no puede ser mas que su - especie del H. Pilosella L., segtn formas italianas afines y casi intermedias.» LMeracium anplecicaule L., Hieracium balsameum Asso.— Hendiduras de las rocas. Tieracium Sabaudum IW. — Willkommi Sch.?—Pudiera ser por el sitio: la des- cripcion parece convenirle. ieracium sylvaticum Lam.—sSelvas. Leontodon hispidus L..— Entre el santuario y la cumbre. Jasione fallax Wk.—Desde los 1.000 m. hasta la cumbre. Wahlenbergia hederacea Rchb.—Orillas de las acequias. ' Erica vagans L.—Carrascales, junto a los caminos. — Avragonensis Wk. (1. class.) a 1.400 m. Erythrea Centaurium L.—Carrascales. Veronica tenuifolia Asso. V. Assoana Wk.—Alcala del Mou- cayo. Mayo. Veronica officinalis L. & Tourneforti.— Sitios humedos junto al santuario. No se cita esta variedad en Aragon. Al ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Veronica saxatilis Scop., forma microcalyx «Dos botanicos extranjeros dieron esta forma como VV’. /ruticulosa L.; los auto- res que conozco dicen lo mismo, excepto Loscos y Pardo (Se- rie imp., p. 302, num. 1497), que la dan bajo V. sazalilis Jacq. lin realidad no tiene glandulosos los racimos. Es muy dificil 6 casi imposible el distinguir con claridad estas dos supuestas especies en estado seco, segiin mis siete muestras de Noruega, Suecia, Alpes, Vosgos y Pirineos. Quiza en otro estado sea factible. Los ejemplares recogidos por Lomax en el puerto de Paja- res y Pico de Penalara ofrecen los racimos glandulosos.» Kuphrasia minima Schi.—En el sitio denominado «La Plana.» Linaria alpina Wk. Lge.—Cerca de la cumbre, a los 2.300 m. Exhala olor fuerte a violeta. Calamintha Clinopodium Bent.—Encinares; flores muy pa— sadas. Teucrium Chamedrys U.—Cercanias del santuario. Lysimachia Ephemerum L. Veruela. * Ligustrum vulgare L.—20 Junio, 1897, a 1.000 mm. Chenopodium Bonus-Henvicus L.—Junto a las paredes del santuario. Orillas de las acequias, junto a II. Monocotiledoneas y Acotiledoneas. Orchis sesquipedalis L.—Prados cerca de Veruela. * — wtcearnata L.—Bosques. * — laxiflora Lam.—Bosques cerca de Vera. — - Noribus albis.—Bosque de hayas. * Plantanthera bifolia Rchb.—10 Mayo. Cerca de Vera. * Ophris apifera Huds. * Cephalanthera rubra Rich.—30 Mayo. Bosques. Juncus bufonius L. 8 fasciculatus.—Junto a las fuentes. Agrostis canina L.—Matorrales. Deschampsia flexuosa Griseb.—Idem. Holcus mollis L. var.! (H. Reuteri Boiss.?). «No conozco el H. Reutervi Boiss. mas que por la descripcion. La planta mont- cAunica del Sr. Vicioso esta desprovista de rizomas en que apreciar el caracter bulboso; pero las cafas son vellosas en los nudos, la panoja derecha y angosta, las glumas largamen- tv acuminadas, lampinas y con los nervios pestanosos, las glu- DE HISTORIA NATURAL. 1D qe millas hicidas, con la flor superior pulverulenta en la parte alta y no vellosa en la base.» Cynosurus cristatus L.—Matorrales. Festuca duriuscula L. «.—En la cumbre. Polystichum Filiz-mas Roth.—Selvas. Asplenium adiantum-nigrum L. Pteris aquilina L.—Selvas. Allosurus crispus Bernh.—Sitios himedos junto al santuario. Grietas de los penascos. Sélo dos musgos he podido hallar fructificados: la Funaria hygrometrica Hedw., en la Fuente de San Gaudioso, y el Ci- clidotus fontinaloides P. B., junto a las aguas corrientes.»> Sesién del 26 de Diciembre de 1898. PRESIDENCIA DE D. FELIX GILA. —Fué leida y aprobada el acta de la anterior. —()Juedé admitido como socio de numero el Catedratico de esta Facultad de Medicina, D. Patricio Borobio, presentado por D.-Felix Gilg. —Se hizo una propuesta de socio de numero. Kl Sr. Moyano did cuenta de sus #studios sobre razas y subrazas de animales domésticos, y en vista de su importancia acordé la Seccién que los redactara en forma de notas para sesiones sucesivas. —K] Sr. Gila did cuenta de la visita hecha por los socios de la Secciédn al Laboratorio quimico municipal, la primera de una serie que hay organizada 4 los establecimientos cientificos de Zaragoza. —EI R. P. Navas dioé lectura a la siguiente nota: «Una cxcursion al Montsant (provincia de Tarragona). Con el fin de contribuir al conocimiento de la fauna, flora y wea de nuestra patria, daré cuenta a la Sociedad de las obser- vaciones que hice en Agosto del ano antepasado 1897 en una rapida excursién que verifiqué al Montsant, uno de los montes mas altos de la provincia de Tarragona, pues su cumbre, la Cogulla, se eleva a 1.159 m., y desde ella puede divisarse, por un lado, el mar de Tarragona, y por el otro, las llanuras de Lérida y Aragén hasta el Moncayo, que se descubre en el horizonte aragonés. Para mayor orden dividiré en secciones el objeto de mis notas. 46 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Notas entomologicas. Ephippiger Panteli sp. n. (1).—o 2 Statura minore, colore fusco-castaneo, segmentis abdominis postice flavescentibus. Caput parvum, vertex obscure ccerulescens. Fastigium verticis compressum, sulcatum. Fastigium frontis parvum, parum elevatum. Pronotum flavo-testaceum, margine antico tenui, postico et lateralibus incrassatis. Carine laterales express, prominen- tes. Prozona longior quam metazona; prozona obfuscata, transverse atro-sulcata; metazona fornicata, impresso-rugu- losa, postice leviter rotundato-emarginata, medio carina vix distincta in ©. Lobi deflexi late impressi; margine inferiore pone medium profunde sinuato, postice angulato-rotundato. Elytra fornicata, fusca, venis incrassatis pallidioribus, costa laterali externa valde expressa, area marginali angusta, con- cava, haud areolata. Pedes graciles, fusco-testacei; tibiee anticee supra spina apicali armate, subtus 6-spinulose; femora postica subtus inermia, vel spinis paucis armata. oS Segmentum anale transversum. Lamina supra-analis vix producta, obtuse triangularis, impressa. Lamina subgenitalis apice triangulariter excisa, stilis obscuris. Cerci triangulares inflexi, apice acuminati, basi intus longe spinosi. Valvule anales infere mucronate. © Lamina supra-analis subrhomboidea, impressa. Lamina subgenitalis medio opaca, submembranacea, transversim stri- eosa, apice sinuata, lateribus parallelis, late incrassatis, niti- dis. Cerci conici, acuminati. Ovipositor sub-falcatus, duplicem pronoti longitudinem fere attingens. Species affinis Hph. Ortega: Pantel. Longitudo corporis (post desiccationem). co” 23™™ © 26™m — pronoti 7 V2 ~- fem. ant. 9,5 10,5 —- fem. post. 15 17 _ ovipositoris 13,8 (1) Restituyo con Finot y otros el nombre genérico de Hphippiger que propuso Latreille ‘Fam. nat. Réegne, an. 1825). Brunner (Prodromus der Eur. Orth.) dice que Burmeister con razon trocé el nombre en Fphippigera; pero a la verdad, ni Burmeis- ter dié ninguna razon de su cambio (Handbuch der Pntom , 1839), ni aparece la tuvie- se, al menos atendible. bE HISTORIA NATURAL. 4T Habitat in Montesancto (Montsant) provincie Tarraconensis. Tengo el gusto de dedicar esta especie al R. P. José Pan- tel, S. J., d quien tanto debe la entomologia espa dola. Knumeracion de los ortépleros hallados en Cabaces ( Tarragona) inmediaciones del Montsant. Forfictlidos. Forficula auricularia L. Blatidos. Eectobia livida Fabr.—Entre la hojarasca del bosque. Mantidos. Mantis religiosa L.—De todas las edades y libreas. Los ejem- plares de los bosques presentaban por mimetismo el color gris terroso que era el del suelo. Geomantis larvoides Pant.— in las laderas meridionales del Montsant, llezando hasta las ultimas estribaciones, a 2 km. del pueblo de Cabacés. Notable descubrimiento que extiende considerablemente el area de dispersién de la especie, hallada asimismo recientemente por el Sr. Azam en el Mediodia de Francia, segun comunicacidn del P. Pantel. La forma catalana difiere algo de la conquense, y es bueno hacer notar las diferencias. Talla notablemente mayor (unos 28 mm. la 9, no siendo mas que de 24 en la forma de Cuenca); espinas del fémur anterior mas numerosas (12 en vez de 10); wranos callosos del pronoto grises 6 blancos (negros en el tipo) y menos marcados en el borde posterior. Todo el conjunto presenta un aspecto de mayor robustez y energia. Aimeles decolov Charp. — abjecta Cyr. (Spallanzania Rossi.) Empusa egena Charp. Fasmidos. Leptynia hispanica Bol. Bacillus Rosii Fab. Acrididos. Paracinema tricolor Thunb. Stenobothrus grammicus Caz. — stigmaticus Ramb.—En los altos del Montsant. 48 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Stenobothrus minutissimus Bol. — binotatus Charp.—En la cumbre del Montsant. — vagans Fieb. — bicolor Charp. — jucundus Fisch.—En sitios frescos. — pulvinatus Fisch. de W. — parallelus Zett. Gomphocerus maculatus Thunb. Stauronotus Genet Ocsk. Ramburia hispanica Ramb.—No la he hallado en Aragon y si en la Puebla de Masaluca y Cabacés (Tarragona) y Man- resa (Barcelona). Epacromia strepens Latr.—Comunisima hasta en las huertas. Sphingonotus cerulans L.—Comunisimo en los vinedos y campos. Acrotylus insubricus Scop. Udipoda cerulescens L. GEdaleus nigrofasciatus de Geer. " Pyrgomorpha grylloides Latr. Ocnerodes Brunneri Bol. Acridium Lyyptium UL. Caloptenus italicus L.--Las diferentes formas y también la var. Watlenmwyliana Pant. Platyphyma Giorneé Rossi.—En lo mas alto del Montsant. Grilidos. @eanthus pellucens Scop. Liogryllus campestris UL. Gryllomorpha sp.?—Ejemplar en mal estado de couservacidn. Gryllotalpa vulgaris L. Locustidos. Phaneroplera quadripunctata Br.—En las liuertas. Thyreonotus Corsicus Serv. Platycleis grisea Fabr. — intermedia Serv. Lphippiger Perezi Bol. — Panteli mihi. Otros insectos recogi de diferentes érdenes, pero aplazo para iueva ocasidn su enumeracidn y el estudio de alguna otra forma. DE HISTORIA NATURAL. 49 | Sesion del 41.° de Febrero de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. En ausencia del Sr. Calderon acttia como Secretario el senor Dusmet. —Se leyé y aprobo el acta de la sesion anterior. —Se hizo una propuesta de socio. —Por unanimidad quedé aprobada la proposicién de Re- forma del Reglamentc presentada y discutida en la sesion anterior. —l] Secretario leyé un oficio de D. Manuel. Jiménez parti- cipando el fallecimiento de su padre el Doctor D. Justo Jimé- nez de Pedro. La Sociedad oy6 con sentimiento esta comuni- cacién por tratarse de una persona de tan relevantes prendas personales y méritos cientificos, que desde la fundacién de la Sociedad de Historia natural pertenecidé a ella prestandola su concurso por espacio de veintidos anos, y acordé dirigir una ‘carta de pésame a su senor hijo D. Manuel. —l Sr. Martinez y Saez dijo lo siguiente: «Tengo el gusto de dar a la Sociedad la noticia de que nues- tro consocio, el R. P. José Pantel, de la Compania de Jesus, ha publicado en Za Cellule, y en su tomo xv, entrega 1.", revista belga que dirige el R. P. Carnoy, un estudio titulado ‘Le Thrizion halidayanum Rond. Hssai monographique sur les caracteres eaterieurs, la Biologic et V Anatomie dune larve para. site du groupe des tachinaires, caya memoria ha sido coronada por el Instituto de Francia (premio Thore). Después de la introduccién viene una interesante historia del parasitismo en los taquinarios, en la cual se hace minu- cioso examen de lo publicado por varios autores, que empieza en 1837 por Dufour y concluye por Meinert en 1889, lo cual permite al autor resumir el estado de los conocimientos sobre este asunto con anterioridad 4 sus descubrimientos publicados _en el estudio; y bien se nota que son grandes los que se des— TR DE HISTORIA NATURAL. 61 Al microscopio se presenta como un conjunto de @ranos irregulares con su estriacién caracteristica indicadora de la exfoliacién romboédrica, diversamente orientados, de extin- cidn uniforme en general, pero con indicios en algunos de ellos de las maclas polisintéticas, y en este caso con las estrias de la macla seg@vin R; la estructura es marcadamente crista— lina. No se observa en esta caliza el mas pequeno indicio de restos organicos, y las inclusiones mas frecuentes son poros gaseosos mas 6 menos alargados en el sentido de las fajas que forma su conjunto. Se encuentran ademas unas laminillas ro- jizas referibles al oligisto y muchos granulos de magnetita, que forman manchas anubarradas en algunos sitios. De trecho en trecho se presentan en estas calizas geodas de variados tamanhos y complicadas formas, cuyo interior esta tapizado de pequenos cristales constituidos por un escalenoe- dro dominante y un romboedro agudo, muy didfanos a veces. Frecuentemente estas geodas se encuentran casi rellenas por unos granos calizos, espatizados y mas duros, trabados por un cemento también calizo, que recuerdan la estructura de las areniscas de Fontainebleau y Westfalia; no deja apenas residuo de arcilla y solo da indicios de hierro, Todas estas calizas se presentan de trecho en trecho atrave- sadas por otra que forma venas delgadas (1 cm. de espesor por término medio), mas obscura, menos friable y algo saca- roidea, la cual deja un gran residuo arcilloso y no da indicios de hierro tratada por los acidos. En el microscopio se observa que esta constituida por granos mas pequehos y menos carac- terizados que los de la primera, sin estrias de macla y con las de exfoliacién rara vez visibles; es mas pura que la anterior, sin laminillas de oligisto ni granulos de magnetita, con muy escasos poros gaseosos y de un aspecto clistico mas bien que cristalino. Los fésiles son muy escasos en esta caliza y estan repartidos con bastante desigualdad, viniendo a formar como nidos en algunos puntos, mientras que la casi totalidad de la roca esta desprovista de ellos. Yo los he encontrado siempre en las cali- zas mas coloreadas, pues como digo anteriormente, suele haber en su proximidad manchas numerosas del 6xido férrico. El mas importante, tanto por no estar citado de Espana que yo sepa, como por ser caracteristico de. este piso del cretacico 62 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA es el Radiolites (Spherulites) Saxonie Rim. sp. (1), pertene- ciente al grupo del Sauvagesi, y del cual he hallado numero- sos moldes internos bastante bien conservados. Aunque bien pudiera ser este el mismo que Prado dibuja en su citada Des- cripcion (lam. 11, fig. 18), con el nombre de Spherulites squa- mosus VOrb., mal determinado por dicho gedlogo, la figura me inclina a creer que la especie hallada por mi no habia sido observada por aquel distinguido naturalista. Ademas de esta especie de rudista perfectamente determinable, he encontrado restos menos completos de otros dos moluscos y de un bra- quidpodo. Los moluscos parece que se pueden referir al Pecten tripartitus y al Pecten (Vola) quinquecostatus Sow., el ultimo citado del cretacico de la provincia, pero no del valle del Lozova, sino de la arenisca del Vellén. El braquidpodo es una Zerebratula, indeterminable en la impresién que yo he visto. Este género también le cita Prado, con la particularidad de que por la misma dificultad con que he tropezado yo, no se atreve a determinar la especie, aunque indica que tal vez sea nueva. Como accidente notable, aunque bien frecuente en esta clase de terrenos, debo hacer notar la existencia de una gruta de estalactitas llamada en el pais la cueva del Cabo del Rio. Esta situada en término de Lozoya, como | km. al S. de dicho pue- blo, y es muy conocida en todos aquellos contornos y facil de buscar porque su entrada se halla junto 4 una casa derruida. No he practicado una verdadera exploracién de ella, pero creo que no ha de resultar interesante; la parte accesible alcanza 4 muy poca profundidad y tiene sus paredes tapizadas de esta- lactita y el suelo cubierto por los restos de pequenos derrum- bamientos de las paredes. Por su fondo corre un arroyo que va a alimentar una fuente prdxima del mismo nambre que la cueva, y cuyo cauce forma un tiinel de un medio metro de altura en la parte 4 que alcanza la vista. Si se pudiera seguir este canal, casi seguramente se encontrarian mas habitacio- nes y tal vez entonces adquiriera interés la exploracién de esta cavidad; pero esto exigiria trabajos de consideracién. Multitud de murciélagos , Vespertilio pipistrellus Schreb.) per- (1) Determinado por D. Lucas Mallada. DE HISTORIA NATURAL. | 68 manecen colgados de las hendiduras del techo y cubren con sus excrementos gran parte del piso. También merece notarse la diferencia que presenta el alveo del Lozoya cuando recorre el cretacico y en su marcha por el arcaico, que acusa perfectamente la diversa naturaleza de los materiales por los que se abre paso. Mientras el rio corre por el cretacico, Su curso es sinuoso, vagabundo, adquiere gran anchura y poco fondo, su corriente es lenta y con frecuencia se divide en brazos, que al reunirse forman islas de extensién variable; es facil percibir en él los dos lechos, mayor y menor, aquel constituyendo una hermosa vega de pastos llamada I] Soto, que en las grandes avenidas se cubre totalmente de agua. Cuando el rio sale de las calizas para entrar en los eneis, el aspecto de su cauce cambia completamente; corre entonces con mayor rapidez por un lecho de pocaanchura pero de gran profundidad, de paredes verticales 6 muy inclinadas y cam- biando de direccién, no indistintamente, sino siempre por la presencia de materiales desigualmente resistentes. He buscado con detencién por toda la orilla del rio que he podido recorrer, las marmitas 6 pot-holes que Prado cita en su trabajo, y he visto que, en efecto, son bastante frecuentes, pero solo en la parte que corre por el arcaico, no habiendo encontrado ni uno sdlo en el cretacico. Los hay mas 6 menos completos, anchos y poco profundos 6 por el contrario, estre- chos y de mucho fondo. Entre ellos es muy notable uno que hay en un gran canto de cuarzo situado frente a la segunda vuelta que da la carretera a la salida de Lozoya en el kil6me- tro 13. Esta marmita tendra mas de 1 m. de profundidad por un diametro de 126 14 cm. y es de seccidn perfectamente circular. Otro sitio donde se pueden observar muchas es en Buitrago, en unos grandes cantos que hay junto a los estribos del puente que da paso 4 la carretera de Irtn. Llama la atencién que en los materiales duros del arcaico se formen estos curiosos acci- dentes y que en los cretacicos que por su escasa dureza parece que debian dejarse horadar con mas facilidad, no se presenten nunca. Quizas, sin embargo, esté fa razén del hecho en la misma falta de dureza de las calizas, que hard que al iniciarse la formacion del pot-Aol sean sus paredes destruidas por la pie- dra 6 piedras que por su movimiento habian de fraguar la excavacidn; por lo demas, es indudable que si en la caliza 64 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA alcanzase la cavidad alguna profundidad, su formacién seria mucho mas rapida que en las rocas duras del arcaico, pero también es cierto que la misma roca en que se formaria la marmita llewaria 4 desaparecer en tiempo breve, desgastada por los materiales mas duros que acarrea el rio. Otro hecho que merece llamar la atencién es la existencia de restos indudables del glaciarismo, que se manifiestan bajo la forma de canchales. Se extienden estos siguiendo casi exac- tamente la linea de separacién del arcaico y el cretacico, pero sdlo en la parte de la divisoria de aguas de Duero y Tajo, lo cual es muy natural, porque estando de aquella parte las ma- yores alturas, debieron persistir alli los hielos hasta época mas reciente y siempre en mayor cantidad. No es dificil que se observen en la otra vertiente del valle, pero indudablemente de existir, son mucho mas escasos, no habiéndolos llegado yo a ver. Constituyen estos canchales 6 morrenas, que deben ser frontales, acumulaciones de cantos de tamanos variables, desde el de arenas hasta el de varios decimetros de didmetro, de materiales diversos, aunque siempre de los que forman las alturas préximas y con un grado variable de pulimento, como acusando recorridos muy distintos. En la carretera de Lozo- yuela 4 Rascafria, en el trayecto comprendido entre este ulti- mo pueblo y Pinilla del Valle, hay frecuentes desmontes en que se ven perfectamente estos canchales. Ademas de los materiales citados hasta aqui, existe en el valle otro que no puede en realidad atribuirse ni al arcaico ni al cretacico, denominado en el pais dier7ra de barros. Esta tierra es una arcilla muy ferruginosa, nada 6 muy poco margosa y en la que a simple vista se perciben granulos feldespaticos y cuar- zosos y laminillas de mica. Al microscopio se ve que los granu- los feldespaticos estan formados por ortosa y plagioclasa, mas abundante la primera. Las micas son también dos, la mos- covita y otra dorada no policroica, que creo puede referirse 4 una biotita alterada; también se observan bastantes granillos de magnetita. Esta arcilla es plastica, aunque no en un grado excesivo, se pulimenta algo por frotamiento con la una y no he observado en ella ningin resto organico macro ni mi- croscépico. Ocupan estos barros una pequena extensidn é la derecha del rio frente 4 Lozoya, y creo que no son mas que un depdsito local de los detritus de la pequena cordillera DE HISTORIA NATURAL. 53) que se extiende entre los puertos de Canencia y La Mar- cuera. Respecto de los materiales arcaicos, los que yo he recogido no acusan a simple vista nada de particular, no habiéndome sido posible hacer, por falta de medios, su estudio microgra- fico. Abundan sobre todo entre ellos los gneis glandulares. Plantas recolectadas en los alrededores de Lozoya en los meses de Julio, Agosto y Septiembre. Criptogamas. ()) Physcia parietina Nyl. Evernia prunastii Ach. Cladonia pyxidata Fy. Parmelia saxatilis Ach. P. Acetabulum Fy. P. tiliacea Ach. P. olivacea Ach.? Endocarpon fluviatile DC. Mnium undulatum Hedw. Grimnia pulvinata Hook. et Tayl. Fanerogamas. ©) Delphinium Consolida \. D. junceum DC. Ranunculus acris L. R. Flammula L. R. aquatilis \. Peonia Broteri B. et R. Papaver Argemone L. P. Rheas i. Fumaria capreolata i. F. parviflora Lam. Diplotazis erucoides DC. Lepidium latifolium UL. Nasturtium officinale R. Br. A strocarpus Clusii Gay. Orthotrichum cupulatum Hoff. Camptothecium lutescens Schimp. Frullania dilatata N. ab K. Asplenium Adiantum-nigrum L. A. Filiz-femina Bernh. - A. lanceolatum Huds. 8. obova- tum. Ceterach oficinarum W. Pleris aquilina \. 3} Reseda luteola L. FHelianthemum glaucum Boiss. Tuberaria variabilis Wilk. Viola palustris L. V. tricolor L. 8. arvensis. Viola odorata L. Drosera rotundifolia L. Parnassia palustris WL. Cucubalus bacciferus L. Agrostemma Githago lL. Arenaria montana L. Dianthus Armeria L. D. brachyanthus Boiss. D. lusitanicus Brot. (1) Clasificadas por D. Blas Lazaro. (2) Determinadas por D. Luis Aterido. ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.— FEBRERO, i899. 3) 66 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Melandrium macrocarpumWk. | Bryonia dioica Jacq. Saponaria officinalis li. — Lerniaria glabra L. Silene legionensis Lag. Hf. scabrida B. Malva Alcea L Corrigiola telephiifolia Pourr. M. parviflora L. Scleranthus annuus L. M. sylvestris L. Sedum album L. M. Tournefortiana L. S. amplexicaule DC. Hypericum per foratum . S. hispanicum \. H. quadrangulum Umbilicus pendulinus DC. Erodium cicutarium L’Heérit. Bunium verticillatum Gr. et E. cherophyllum Coss. [a Godr: Geranium pyrenaicum i. Daucus Carota L. G. Robertianum L. — Carum verticillatum Koch. Adenocarpus intermedius DC. Peucedanum officinale L. A. complicatus J. Gay. | Eryngium tenue Lam. Lotus corniculatus Lh. — Feniculum vulgare Gertn. L. pedunculatus Cav. — Helosciadiumnodifiorum woch. Lupinus hispanicus B. et R. | Pinpinella magna \. Medicago falcata \. | Hedera Helix L. M. sativa L. | Lonicera hispanica B. et R. Ononis procurvens Wallrh. | Sambucus Lbulus L. Trifolium arvense L. SS. nigra L. Tr. pratense L. | Galium palustre L. Tr. procumbens L. |G. verum L. Tr. ochroleucum ML. — Rubia peregrina 1. Vicia angustifolia L. _ Trichera arvensis Schrad. V. sativa L. Tr. subscaposa B. et R. V. onobrychioides L. Dipsacus fullonum Mill. Lathyrus sylvestris \. | Achillea Millefolium L. Rosa canina lL. Anacyclus clavatus Pers. Potentilla Tormentilla Sibth. | Microlonchus salmanticus DC, P. argentea L. Andryala integrifolia L. P. veptans L. | A. macrocephala DC. Rubus ideus lL. | Artemisia vulgaris L. Crataegus Oxyacantha L. Anthemis arvensis L. Prunus spinosa \. A. nobilis L. Poterium Spachianum Coss. Carlina vulgaris L. Spiraea Ulmaria L. Centaurea alba LL. 8. deusta DC. Epilobium carpetanum Willk. | C. Calcitrapa L. Ff. palustre L. _ C. carpetana B. et R. DE HISTORIA NATURAL. Centaurea Cyanus L. C. Seusana Chaix. Chondrilla juncea L. Helichrysum serotinum B. Santolina rosmarinifolia lL. Cichorium Intybus L. Crepis polymorpha NV ally. Cirsium lanceolatum Scop. EHvaz carpetana Lge. Filago arvensis L. FF. montana L. Hypocheris radicata L. Lactuca virosa lL. Lampsanda communis L. Pulicaria arabica Cass. Scolymus hispanicus L. Senecio foliosus Salzm. S. Duriew Gay. Sonchus asper Vill. Thrincia tuberosa DC. Campanula patula L. C. Rapunculus L. Jasione carpetana B. et fh. J. montana L. J. perennis Li. Cuscuta minor DC. Brica scoparia L. Lysimachia vulgaris L. Ligustrum vulgare L. Fraxinus angustifolia Vahl. Convolvulus arvensis L. Echium vulgare lL. E. italicum L. Lycopsis arvensis Li. Anchusa officinalis L. &. lepto- phylla. Myosotis palustris With. Solanum Dulcamara \. S. nigrum i. Datura Stramoniuin L. 67 Hyosciamus niger L. Digitalis Thapsi iL. D. purpurea L. Linaria nivea B. et R. L. saxzatilis Link. et Hoffm. L. spartea Hoffm. et Link. Scrophularia caning \,. Veronica Anagallis L. V. serpyllifolia L. V. Beccabunga iL. Verbascum pulverulentum Vill. Verbena officinalis L. V. supina L. Ballota nigra L. Betonica officinalis L. Brunella alba Pali. Br. alba Pall. &. pinnatifida. Br. vulgaris L. Calamintha alpina Benth. Lamium Galeobdolon Crantz. L. amplexicaule L. Lavandula pedunculata Cav. Marrubium vulgare L. Phlomis Herba-venti li. Lycopus europeus L. Mentha Pulegium i. M. rotundifolia L. M. sylvestris L. Salvia Verbenaca L. Teucrium Polium . T. Polium L. 8. montanum. T. Scorodonia L. Thymus Mastichina L. Th. Serpyllum UL. Th. Zygis \.. Armeria plantaginea W. Plumbago europed L Plantago Coronopus L. Pl. lanceolata L. Pl, subulata L, 68 Chenopodiuin viride L. Ch. Botrys \. Amarantus retroflerus L. Polygonum aviculare L. P. Persicaria L. Rumex bucephalophorus L. R. papillaris B. et R. Humulus Lupulus \. Urtica dioica L. Ulmus campestris L. Populus alba i. Salix viminalis L. Corylus Avellana L. Alisma Plantago L. Lemna minor i. Allium pallens L. All. spherocephalum L. Ornithogalum pyrendicum L. Colchicum autumnale L. Merendera Bulbocodium Ram. Juncus bufonius L. J. effusus L. J. sylvaticus Reichb. J. lamprocarpus Khrh. ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Gladiolus illyricus Koch. Iris Pseudoacorus L. Orchis latifolia \. O. laxiflora Lam. Serapias Pseudo-cordigera Mo- rio. Arum maculatum L. Typha latifolia lL. Agrostis vulgaris Vith. Dactylis hispanica Roth. Hragrostis megastachya Link. Cynodon Dactylon Pers. Holcus lanatus \.. H. motlis Li. Arrhenatherum elatius M. kK. Cynosurus cristatus L. Deschampsia cespitosa P. de B. Aa@leria crassipes Lee. Macrochloa arenaria Kunth. Phragmites communis Trin. Stipa Lagasce R. et 8. Trisetum ovatum Pers. Pinus sylvestris L. Moluscos recogidos en los alrededores de Lozoya. |) Helix nemoralis Lin. H. adspersa Lin. Planorbis limophilus W. (nue- vo para Espana). Pl. metidgensis Forbes. Linnea ovata Drp. forma y v. inflata. Linnea truncatula v. hispa- nica W. Cionella (Zua) lubrica Mill. Balea Deshayesiana Bet. Auncylus simplex Bet. A. prestans W. (nov. sp.) Pisidium nitidulum Jen.-prox. (1) Clasificados por el Dr. Westerlund, de Ronneby, Suecia. DE HISTORIA NATURAL. ; 69 SECCION DE SEVILLA. Sesi6én del 14 de Enero de 1899. PRESIDENCIA DE DON JULIO FERRAND., — Se leyo y aprobo el acta de la sesién anterior. —E]l Sr. Chaves leyo las siguientes «Notas mineralogicas. 1]. ESPARRAGUINA DE VERA (ALMERIA).—- Tratandose de una localidad que sin ser nueva, al menos es poco conocida por lo que toca a la esparraguina, he creido util dar 4 la Sociedad esta breve noticia relativa a cristales de dicho mineral que me han sido donados por el Sr. Calderén, el cual los recibié a su vez de D. Mariano Solano. Es notable en la esparraguina de Vera el tamano de los cris- tales. Miden estos hasta unos 4 cm.; no suelen estar regular- mente desarrollados, mostrandose alguna vez tabulares y afec- tando facies rombica. Las formas observadas son (1010), (1011), (1120)?, y en un solo ejemplar (1121)? Kl color, verde esparrago, es regularmente intenso, y bajo el mismo espesor es idéntico al de la esparraguina de Jumilla. A pesar de sus numerosas grietas y fracturas interiores, los ejemplares examinados son bastante transparentes. La dureza es muy lgeramente superior a la que presentan los ejemplares de Jumilla. La densidad es 3,204 a + 24 C. Las propiedades dpticas no ofrecen nada de particular. Haciendo girar entre los nicoles cruzados y en luz convergente una seccion normal al eje senario, la figura de interferencia se muestra anomala, sufriendo una ligera dislocacion. En lamina delgada se observan poros gaseosos de formas irregulares, y algunos microlitos alargados parduzcos, unos y otros alineados en direcciones diversas sin orientacion deter- minada. 2. EL SILICATO DE HIERRO DEL MANTO DE LOS AZULES EN LA SIERRA DE CARTAGENA.— IE] interesante hallazgo de un nuevo silicato, cuando tan pobre es actualmente la mineralogia espa- nola por lo que toca 4 este grupo de combinaciones, constituye sin duda un verdadero acontecimiento capaz de despertar la 70 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA mas viva atencién por parte de aquellos que cultivan los cono- cimientos mineraldgicos y petrograficos. Ademas, la abun- dancia con que parece presentarse dicho mineral es una cir- cunstancia que acrecenta dicho interés, permitiendo facilmen- te, no ya tan sélo su estudio individual 6 aislado, sino también el de sus relaciones con las masas pétreas circundantes. Debo advertir ante todo que alguna de las ligeras observa- ciones de que en esta nota voy 4 dar cuenta a la Sociedad, se basan en las comunicaciones hechas por el Sr. Calderon, pues desconozco por completo si el Sr. Massart, 4 quien se refiere el Sr. Calderon en estas comunicaciones (1), ha publicado 6 no sus observaciones y estudios; y también que mis incompletas investigaciones se refieren 4 dos ejemplares que desde Madrid me remitié el Sr. Calderén. Los resultados de estas investiga— ciones tienen sdlo el caracter de datos provisionales para el mas completo conocimiento del nuevo silicato. El mineral del Manto de los Azules es una mezcla de diver- sas especies. A mas de la galena y el sulfuro de plata que con- tiene, segtin ya lo indicé el Sr. Massart, mis preparaciones microscépicas acusan la mezcla de dos minerales lapideos. Claro esta que tratandose de una mezcla los resultados anali- ticos tienen que ser algo diferentes y hasta desacordes, sobre todo bajo el aspecto cuantitativo. Pero precisamente por esto, creo mas indispensable un detenido estudio analitico verifi- cado sobre diversos ejemplares cuyas secciones deben ser pre- viamente examinadas al microscopio. El estudio de mis ejemplares me ha sugerido algunas dudas acerca de la composicién que, segun el Sr. Calderén, atribuye M. Massart al mineral en cuestién. De él resulta que el hierro no se encuentra sdlo al estado de sal ferrosa, pues en la diso- lucion clorhidrica existen juntas la sal ferrosa y la férrica. Llamo la atencién sobre esta importante particularidad, que en rigor no puede ser esclarecida hasta haber adquirido un conocimiento cierto y completo de la composicion cualitativa é inmediata del material. Una pequena porcidn de sal férrica (1) Una de estas aparece en los ANALES de esta Sociedad, Actas, tomo xxvi, pagi- na 173. Del descubrimiento, propiedades y andlisis de dicho mineral se ocupo también el Sr. Calder6n en Zos silicatos de la Peninsula ibérica (Annaes de Sciencias Naturaes, Porto, vol. 1v, 1897, pég. 35.) D"® HISTORIA NATURAL. 71 puede, en efecto, pasar 4 ferrosa si en el seno de la disolucién clorhidrica se desprende hidrégeno por la accién del hidracido sobre determinados sulfuros. Si cierta porcion del hierro se encuentra al estado de sal férrica, ya a causa de la naturaleza del mineral, ya 4 conse- cuencia de evoluciones posteriores 4 su formacion, los resul- tados del analisis de M. Massart, y por tanto la formula empi- rica probable que de ellos se saca (1), deben ser modificados. El mineral del Manto de los Azules contiene también cloro. El liquido que resulta del ataque por el acido nitrico precipita sensiblemente por el nitrato argéntico diluido. La presencia del cloro constituye otro dato importante que hay que tener en cuenta al establecer la composicién, ya sea del nuevo mi- neral, ya del mezclado a él en los ejemplares estudiados. Estas observaciones aisladas me llevan a ejecutar un anali- sis cualitativo minucioso y completo de sdlida base al estable- cimiento de la naturaleza y constitucién del silicato. Las diferentes densidades observadas en mis ejemplares demuestran hasta que punto es homogénea la mezcla de los minerales que los constituyen. A la misma temperatura de + 15° C., he hallado las densidades 3,1384 para el mineral en fragmentos y 3,0969 para el mineral pulverizado. Como la masa es bastante porosa y encierra gran cantidad de aire, he dejado la substancia tres dias dentro del frasco con el agua, agitando con frecuencia hasta desalojar el aire por completo. Debo hacer observar, por lo que se refiere al mineral pulveri- zado, que el depdsito de la porcién mas tenue se verifica en el agua con una lentitud extremada, permaneciendo ésta lecho- sa, aun después de pasar por los filtros menos porosos de la casa Merk, y de ser sometida durante un cuarto de hora a la centrifuguizacion en el aparato que posee el laboratorio del Instituto provincial de Higiene de esta capital. En el liquido resultante del tratamiento por el agua no hay vestigios de cloruros, ni de sulfatos, que tampoco existen en la disolucion clorhidrica. Al intentar el estudio petrografico del mineral en cuestion, (1) Esta formula, expresada en ‘itomos y fracciones de dtomos, seria la siguiente 6 un miultiplo de ella: Siszu6 5.5783 Fess, Aloses Ca one H 6194 72 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA he conseguido tallar preparaciones suficientemente delgadas para su examen dptico. Desde luego se observa, ya con el -auxilio de la lente, la existencia de dos minerales diferentes constituyendo mezcla no homogénea. El mas abundante de ellos es verde esparrago bastante intenso y el otro incoloro. Con ayuda del microscopio puede observarse que este segundo es mas refringente que el primero, ofreciendo algunos cruce- ros que forman angulos obtusos 6 agudos. En cambio el mine- ral verde descubre una estructura especial, de que da idea la figura adjunta que representa una preparacion en donde se hallan reunidos los dos minerales, - P _ een ae, * 7) ‘ y e.) ‘sy é: ee all El mineral verde no es pleocroico y constituye un agregado cristalino isotropo. El incoloro muestra entre los nicoles cruza- dos dos direcciones de extincioOn normales entre si, y parece ser rombico. Kn el campo de la preparacién aparecen algunos granos de contorno un tanto desvanecido, opacos y obscuros. Debo advertir que las secciones destinadas a dicho estudio Optico deben ser muy delgadas, pues sdlo bajo muy pequeno espesor desaparece la opacidad. En notas sucesivas pienso comunicar a la Sociedad el resul- tado de mis investigaciones acerca del mineral del Manto de DE HISTORIA NATURAL. 73 los Azules, asi como algunas consideraciones & que su descu- brimiento se presta & mi juicio. 3. SOBRE LA NATURALEZA DE LA MATERIA COLORANTE DE LA SAL AZUL DE VILLARRUBIA DE SANTIAGO.— Desde que el Sr. Cal- deron me mostré unos ejemplares fuertemente coloreados de la sal azul de Villarrubia de Santiago, haciéndome ver las par- ticularidades de dicha coloracién, y did cuenta a la Sociedad de las investigaciones hechas en tal respecto emitiendo una nueva hipotesis (1), excito mi interés esta cuestidn, respecto a cuya resolucion no creo se hayan aplicado los mineralogistas y quimicos posteriormente. Daré a conocer brevemente mis observaciones actuales sobre la naturaleza de esa materia co- lorante azul, cuya inestabilidad ha sido ya notada desde hace bastante tiempo. Sabese que esta coloracion se destruye cuan- do se eleva la temperatura a 200 6 250°. Seguin afirma el pro- fesor Weinschenk (2), la coloracién azul, que desaparece me- diante la accion del calor, reapareceria bajo la influencia de los rayos Réntgen, y ésta, con otras circunstancias, induce al mencionado sabio aleman a atribuir las coloraciones acciden- tales de los minerales 4 substancias de naturaleza inorganica. No ha de ser ésta la ocasidn en que yo discuta las opiniones del distinguido mineralogista; pero Limitandome a las obser- vaciones hechas sobre la sal de Villarrubia de Santiago, puedo manifestar modestamente mi creencia de que en este caso par- ticular, como en otros varios, la coloracién es debida a mate- rias pigmentarias de naturaleza organica, es decir, @ combina- ciones de carbono. El estudio micrografico que he hecho de la sal azul no sera objeto de esta nota brevisima. Me ceniré a los caracteres pecu- liares a dicha materia colorante. Ks sabido que la disoluciOn acuosa de la sal azul es incolora. Yo he comprobado este caracter valiéndome de agua destilada sin reaccién acida, perfectamente neutra. En el acto de esta disolucion en agua se desprenden algunas burbujas gaseosas que proceden de las inclusiones. La disolucion ofrece una lige- risima reaccion acida, sensible a la ftaleina del fenol, pero no (1) La sal azul de Villarrubia de Santiago. (Actas de la Soc. ESP. DE HIST. NAT., tomo xxv. pag. 18 A 21.) (2) Zeitschr. d. Deutsch. geolog. Gesellschaft, Jahrg. 1896. ve ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA al tornasol sensible de que me he valido. Este caracter de la disolucién acuosa de la sal de Villarrubia se halla evidente- mente renido con la hipétesis emitida por el profesor 8. W. Johnson, respecto a la sal azul de Stassfurt (1), de que la materia colorante sea un subcloruro de sodio. A mi juicio, tal hipdtesis es inadmisible, 4 menos de desechar el origen acueo de la sal gema, hoy incontestable, porque ese subcloruro de sodio no podria subsistir en la disolucién acida originaria del mineral, ni tampoco desenvolverse en el seno de la masa cris- talina mediante acciones posteriores al proceso cristalogénico, como pudiera admitirse respecto a otros minerales. Estoy seguro de que la reaccion acida se debe a la sal y no ila materia colorante, porque fragmentos incoloros del mismo ejemplar ofrecieron también dicha reaccién. Anadiendo un acido a la disolucion acuosa incolora no rea- parece la coloracion primitiva; tampoco lo hace con los alcalis. Haciendo actuar el cloroformo sobre el mineral pulverizado se obtiene una disolucioén de la materia colorante que evapo- rada sobre un vidrio de reloj al aire no deja residuo azul. Pa- rece que se trata de una substancia volatil; pero yo creo que la desaparicion del color es debida a la influencia del oxigeno del aire. Esta cuestién sera objeto, por parte mia, de nuevas y mas delicadas investigaciones, que giraran al mismo tiempo sobre la composicidn quimica del mineral. De estas nuevas investigaciones formara parte el estudio del espectro de absor- cién, 4.cuyo fin he tallado una gruesa lamina bastante colo- reada, en una tinta media entre la del sulfato ciiprico y la de la disolucién acuosa débil del azul de metileno. Idéntica, aunque no tan intensa, es la coloracién que ofrece un ejemplar de thenardita de la misma localidad en masa cris- talina, que me proporcioné el Sr. Calderén, y cuya materia pigmentaria, seg@tin éste opina, y estoy de completo acuerdo con él, no debe diferir de la que es objeto de mis reconoci- mientos respecto 4 la sal de Villarrubia de Santiago.» (1) Dana: A System of Min., 1888, pag. 112. DE HISTORIA NATURAL. 75 —Se dio lectura 4 la siguiente nota remitida por el Sr. Barras: « Datos para la florula sevillana. Fam. Ninfeaceas. Nuphar luteum Sm.—Sevilla, en el rio Guadaira. Fam. Umbeliferas. @nanthe globulosa L.— Cazalla. Feniculum vulgare Gertn.—Sevilla; Cortijo de Cuartos; Dos Hermanas; Camas. — piperitum DC.—Cortijo de Cuartos; Dos Hermanas. Anethum graveolens L.—Sevilla. Tordylium maximum L.—Cazalla. Smyrniuvm Olusatrum L.-—Dehesa de Gascon, Marchena. Hippomarathrum plerochlenum B.—Sevilla. Scandix Pecten Veneris L.—Sevilla; Alcala de Guadaira; San Juan de Aznalfarache. — australis L.—Alcala de Guadaira. Aunthriscus nodiflorus Arth.—Sevilla. Ammi Visnaga Lam.—Sevilla; Vega de Triana; San Juan de Aznalfarache; Castilleja de la Cuesta. — majus L.—Sevilla. Apium graveolens.—L. Sevilla. — nodiforum Rehb.—Sevilla; Dehesa de Gascon, Mar- chena. Cicuta virosa L.—Sevilla. Ptychotis ammoides Koch.—Dehesa de Gascon, Marchena. Petroselinum sativum Hoffm. Sevilla. (Cult.) Bupleurum junceum L.—Cazalla. — tenuissimum L.—Cazalla. — rotundifoliwm L.—Sevilla. — fruticescens L..—Sevilla. — spinoswm L.—Cazalla. Daucus Carota L.—Sevilla; Castilleja de la Cuesta. — Mauritanicus L.—Sevilla. — Bocconi Guss.—Castilleja de la Cuesta. Caucalis leptophylla L.—Sevilla. Torilis infesta Hoffm.— Sevilla; Dehesa de Gascon, Marchena. Thapsia villosa,..— Almonte. — decussata Lag.— Sevilla. 76 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Fam. Araliaceas. Hedera Helix L..—Sevilla. (Cultivada y escapada.) Fam. Mirtaceas. Myrtus communis L.—Sevilla; Almonte. Bucaliptus Globulus Uaill.—Sevilla. (Cult.) Fam. Granataceas. Punica Granatum V..—Sevilla. (Cult.) — — var. sylvestris.—Sevilla. Fam. Saxifragaceas. Sazifraga cvarata Vill. var. intricata Lap.—Cazalla. — Tridactylites L.—Cazalla. Fam. Haloragidaceas. Callitriche verna L..—Moron. (Cala!). Myriophyllum spicatum L.—Sevilla. SECCION DE ZARAGOZA. Sesi6én del 25 de Enero de 1899. PRESIDENCIA DE DON BRUNO SOLANO. —Se leyo y aprobo el acta de la sesioén anterior. —(Juedo admitido como socio de numero D. Julio Otero, presentado por el R. P. Navas. —El R. P. Navas leyo la nota siguiente: «Una excursion al Montsant (provincia de Tarragona). Notas botanicas. No siendo el caluroso y seco Agosto idéneo para recoleccio- nes fanerogamicas, ni disponiendo de tiempo suficiente para preparar lo recogido, reuni algunos liquenes, cuyo estudio tenia para mi interés particular. Su lista es la siguiente, adi- cionada de alguna que otra especie que posteriormente he recibido de D. Sebastian Vallespi, quien las recogié en el pue- blo inmediato La Figuera, DE HISTORIA NATURAL. 7 Cladoniaceos. Cladonia pungens Ach.—Frecuente en el suelo de bosques y matorrales. — furcata Huds. var recurva Hoffm.—Con la anterior. — — var. racemosa Hoffm. f.* spinulosa Scheer. — — var. subulata L.—Escasa. — pyxridata L. var. pocillum Ach. Vile. Trompetillas.— En. umbrias. — fimbriata lL. var. radiata Schreb.—Como la anterior. — endiviefolia Ach.—En el suelo, abundante en los bos- ques. Vule. Moho de seta. Catalan: Floridura de rove- lionera. — alcicornis Lehtf.—Con la anterior, mas escasa. Ramalinaceos. Ramalina calicaris L. var. fastigiata Pers.—En las encinas. Lvernia prunastvi L.—En los pinos, ete. Cetrariaceos. Cetraria aculeata Schreb. var. campestris Scheer.— En el suelo de los bosques y matorrales. Peltigeraceos. Peltigera canina L. var. ulorrhiza Fik.—En bosques frescos, en el suelo y sobre el musgo. Parmeliaceos. Parmelia scortea Ach.—Sodlo en el tronco de un pino secular. — saxatilis L.— En rocas y troncos. — caperata L.—En troncos. — conspersa Ach. var. datior Scher.—En pizarras. Las silu- rianas del Priorato estan cubiertas de esta Parmelia. — olivacea L.—Troncos. Fisciaceos. Anaptychia ciliaris L. var. crinalis Schi.—En troncos de encina y otros. Physcia stellaris L. En troncos y ramas; comun, 78 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Physcia stellaris var. aipolia Ach. — — var. leplalea Ach. — — var. tenella Scop.—La mas abundante. Xanthoria parietina L.—Comun en casi todos los troncos y ramas viejas. Lecanoraceos. Amphiloma lanuginosum Hoftm.— Al pie de los troncos. Squamaria lentigera Web.—En suelos calizos. — crassa Huds.—Entre rocas calizas. — saxicola Poll.—Sobre rocas. La Figuera (Vallespi). Placodium fulgens Sw.—¥n el suelo y en las rocas. No citado atin en Cataluna. Lo hallé también en Manresa. — callopismum Ach.—En caliza fina 6 compacta. — murorum Hoftm. var. lobulatum Fik.—La Figuera (Va- llespi). — teicholytum Ach.—Sobre caliza. — canescens Ach.—Idem. — candicans Dicks.—Idem. — circinnatum Pers. var. Agardhianum Ach.—En piedras calizas. . Caloplaca phlogina Ach.—En cortezas de avellanos y otras. — pyracea Ach.—Con la anterior. — erythrocarpa Pers.—En las piedras. — hematites Chaub.—En las cortezas de avellanos. Lecanora subfusca L.—Comiun dondequiera. Recogidas las si- guientes: — — var. vulgaris Scher.— Comunisima en las cortezas. — — yar. glabrata Ach.— Kn los avellanos. — atra Ach. var. vulgaris Scher.—Frecuente en cortezas y piedras. — albella Pers.—En cortezas lisas. Rinodina exigua Chaub.—Con la L. subfused. Aspicilia cinerea L. var. vulgaris Scheer.— En las piedras cali- zas, lo mismo que las siguientes. — gibbosa Ach. — calcarea L.—Muy frecuente. — — var. concreta Scher. f." tessellata Hoftm. — — — f." multipuncta Sur. — chalybea Scher.—En calizas compactas. DE HISTORIA NATURAL. 719 Aspicilia tenebrosa Fw.—Idem. Urceolaria scruposa Ach. —Frecuentes las siguientes varie- dades: — — var. vulgaris Schier.—Sobre rocas. — — var. bryophila Khrh.—Sobre musgo. — Jillarsi Ach.—Muy comin en rocas calcareas. Lecideaceos. Psora decipiens Ach.—En la tierra. — festacea Ach.—Como la anterior. Toninia mamillaris Gouan.—En las rocas. — candida Web.—Como la anterior. — tabacina Ram.—En el suelo. — vesicularis Hoffm.—Idem. Lecidea eleochroma Ach.—Comunisima en las cortezas. — premnea Ach.—KEn troncos. — alboatra Hottm. var. epipolia Ach.—En piedras calizas. Bialora fuscescens Smtr.— En las cortezas de pino. No citada aun en Espana. Grafidaceos. Arthonia punctiformis Ach.—En las cortezas de avellanos junto ala ermita de Nuestra Senora de la Foya. La he hallado abundante en Sobradiel (Zaragoza) sobre Negundo /raxi- nifolium Nutt. Nueva para Espana. Endocarpaceos. Verrucaria myriocarpa \Wkrb.—En caliza, como las siguientes. — purpurascens DC.—En placas de hasta un decimetro y mas de diametro. Nueva para la flora espanola. — conoidea K. Fr. — Dufouri DC. — Schereri i. Fr. — obfuscans Nyl.— Nueva para Hspania. Colemaceos. Collemodium plicatile Ach.—Kn suelos calizos. Collema pulposum Ach.—Idem. — flaccidum Ach.—Rocas. — furvum Ach.—Rocas. La Figuera (Vallespi). 80 ACTAS DE LA SOCTEDAD RESPANOLA Total 72 formas liquenicas; numero considerable si se atien- de al brevisimo tiempo de que pude disponer y a la escasez relativa de liquenes en toda aquella comarca de aire seco y suelo movedizo.» —K] Sr. Jimeno (D. Hilarion) leyé lo siguiente: «Pirolusita cristalizada de Torrecilla (Teruel). Acostumbrado 4 manejar en las operaciones de laboratorio la manganesa terrosa, de color negro rojizo, que tizna cuanto toca, llamé mi atencién una muestra cristalizada que recibi con otras para valorar en ellas su riqueza metalica. Por su aspecto, parece fundicidn gris, y el polvo cristalino en que se disgrega facilmente es grafitoideo. Reducida a polvo es negra y mancha en negro también la porcelana. Su estructura a simple vista es granugienta, pero en la parte interna los cris— tales son perceptibles. Hl microscopio pone de manifiesto la forma de éstos, revelando ser prismas ortorémbicos deforma- dos por la truncadura de sus aristas obtusas. La masa en conjunto es arrimonada y negruzca, pero en la fractura aparece siempre acerada y brillante. Las reacciones quimicas que caracterizan su naturaleza son: Calcinado el mineral produce oxigeno. Por el clorhidrico en caliente se ataca, desprende cloro y deja como residuo algo de silice. Kl mineral mezclado con acido sulftirico diluido y oxalico, desprende carbonico fundido con sosa y forma una masa verde que azulea al enfriarse. En la llama de oxidacién comunica a la perla de borax colo- raciOn violeta que desaparece en la de reduccion. Si se calienta el mineral con minio y acido nitrico diluido toma el liquido color de purpura. Sus soluciones precipitan por el sulfuro amdnico originando el sulfuro de color carne caracteristico. Determinaciones cuantitativas de los elementos que forman el mineral descrito permiten formular el siguiente resultado > relativo & su composicién en 100 partes: BidX1do0 de MANFanesO' sy. .s oie)» « wlalwie cists - 95,52 Oarhonato célcico:.c2) ne. kee dee paptien Saree 0,93 SiCO. Se © 6 are aisle cron here ere ate © ata ole en Garey Pais 2,10 DE HISTORIA NATURAL. : 81 Sesion del 1.° de Marzo de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. —Se leyo y aprobo el acta de la sesidn anterior. ev —(Quedé admitido como socio numerario Vidal (D. Pio), Ayudante del Museo de Ciencias naturales, propuesto por D. José de Zuazo y D. Rafael Blanco, pre- sentado en la sesion anterior. —Se hizo una nueva propuesta de socio. El Sr. Secretario dio cuenta del fallecimiento de D. Bruno Solano, Presidente de la Seccién de Zaragoza, Catedratico de aquella Universidad, dejando el enumerar sus muchos méritos ala iniciativa de los socios de la mencionada Seccidn que de- sean hacerlo. Y a propuesta del Sr. Presidente, que enaltecid la importancia de la pérdida que experimentaba la Sociedad con este motivo, se acordd constase en el acta el sentimiento de la misma por tan dolorosa causa. —Por encargo del Sr. Caballero, de Pontevedra, presentdé el Sr. Secretario diez laminas en fotografia de diatomeas de Mo- ron, hechas por aquél y reducidas de otras que obtuvo a 400 diametros, las cuales comprenden 332 figuras. Representan éstas, con rara perfeccién, 260 entre especies y variedades, habiendo naturalmente entre las figuras algunas repetidas 6 representadas bajo distinta faz para poner de manifiesto deter- minados caracteres. Como se notara desde luego, el total de formas resulta verdaderamente rico tratandose de un solo de- posito, pues en la lista del malogrado Cala, que es la mas completa de las referentes 4 Mordn, sdlo figuran 133 entre especies y variedades. —A continuacidn se did cuenta de un trabajo del Sr. dela Fuente, titulado Apuntes criticos sobre la fauna de la provincia de Ciudad-Rea/l, que se acordé pasara 4 informe de la Comisién de publicacion, asi como otro del Sr. Bolivar referente a la bibliografia y enumeracion de los géneros de los ortopteros. ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.—MARZO, 1899. 6 82 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA —E1 Sr. Bosca, de Valencia, remite las siguientes «Nolicias sobre una colecciin paleontologica regalada al Bacmo. Ayuntamiento de Valencia (1). Dispuesto a regresar 4 su patria el ingeniero valenciano D. José Rodrigo Botet, dedicado durante algunos anos a pin- giies negocios en la Reptiblica Argentina, se encontro en aquel pais con el naturalista D. Enrique de Carles, catalan de origen y entusiasta recolector en el Sur de América, quien, sin repa- rar en las fatigas y peligros consiguientes 4 la exploracién de las soledades del apartado territorio de las Pampas, habia logrado reunir gran numero de huesos fésiles pertenecientes a varias especies ya extinguidas de mamiferos. Para ello tuvo que hacer el intrépido naturalista vida comtin con los indige- nas, cuyos dialectos conocia, aprovechando las épocas de se- quia para visitar los frecuentes cambios de alvéolo que tienen lugar en los desagiies de aquella inmensa red fluviatil del Plata, que extendida por la llanura derrumba con facilidad las inestables orillas, poniendo de manifiesto 4 veces esquele— tos casi completos. El Sr. Rodrigo Botet comprendidé desde luego la importancia de aquellos tesoros paleontol6gicos, que si alli en Buenos Aires, donde existe el mejor Museo de la especialidad de la region, le parecia notable porel numero de piezas y en general por lo bien conservadas, trasladadas 4 su pais, en el que muy poco 6 nada suele verse de tales objetos, habia de resultar de mucho atractivo para el puiblico en general y de gran estudio para los hombres de ciencia, merced 4 joyas de inestimable valor, seg@tin el Sr. Carles, como restos esqueléticos de especies inéditas reiteradamente solicitados por los paleontélogos. Ha- llabanse, pues, 4 miles de leguas de la patria dos espanoles animados por un mismo sentimiento, aunque latente al pron- to: el de poder servir 4 su pais aportando un tan raro elemento de cultura como es todo lo que a la geologia se refiere, tanto por el desconocimiento general entre nosotros de dicha cien- cia, como por recaer los objetos coleccionados en un grupo (1) Véanse los niimeros correspondientes al5 y 8de Enero de 1890 del diario de Valencia Las Proviucias. ¢ DE HISTORIA NATURAL. 83 de los mas faciles de comparar con lo existente, representando unos animales que por sus tamanios 6 por lo tosco en sus for- mas, total y parcialmente observados, parecen desde luego incompatibles 6 como desligados de la naturaleza que hoy vemos. En tales circunstancias, no fué dificil un contrato en el que no se sabe qué apreciar mas, si la nota patridtica del capitalista 4 quien sugirid la idea de legar un recuerdo de su estancia en ultramar a su ciudad natal, 6 la del colector que, habiendo dado por bien empleados todos sus afanes, cedia los fosiles por mucho menos precio de lo que valian, con la con- dicidén de que se les diera el destino imaginado, acariciando de paso la esperanza de que él mismo habia de dejar instalada la coleccidn en Valencia, donde quedaria en lo porvenir como una de las mayores curiosidades para el visitante del pais, y que con arreglo a la mas elemental idea de justicia tendria que Hamarse « Coleccién paleontoldgica de R. Botet». Por desgracia, la agitacion en medio de la cual suele des- arrollarse la vida moderna torcid de improviso el buen rumbo que llevaba el asunto; y si bien el Excmo. Ayuntamiento de Valencia se halla en plena posesién de los restos fosiles aludi- dos, solemnemente donados por el propietario, y principiados a montar por el inteligente naturalista Sr. Carles, ha sido a costa de retrasar la continuacién de los trabajos de ordena- cidn y montura de los respectivos ejemplares, después de ha- ber quedado éstos expuestos a facil deterioro, y sin que a la fecha pueda aun fijarse el término de la obra ni el local donde podra coronarse la empresa propuesta (1). El trabajo preparatorio suspendido en 1890 para la recons- titucidn de los esqueletos se ha reanudado, aunque por de pronto no puede intentarse nada respecto a su montaje. Esto exigiria un sitio adecuado y definitivo, del cual atin no se dis- pone, pero entretanto se procura reunir y ajustar los trozos rotos; trabajo de atenta observacién que no puede menos de ser lento é interrumpido con frecuencia, dada la manera como se hallan las piezas, y cuando la casualidad proporciona el encuentro de fragmentos evidentemente hermanos, se les (1) La coleccién se halla depositada hoy en el local que fué hospital de San Pablo en las afueras de la calle de Cuarte. 8k ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA une desde luego con cuidado y sdlidamente, haciéndose de paso el recuento de las piezas que constan en antecedentes, si bien falta un verdadero catilogo que debid existir, segin referencias de la lista que sirve de guia. Todavia se han de- jado algunas cajas por abrir para evitar aumente la confusidn en que aparecen los huesos por efecto de traslados, nunca bastante precabidos tratindose de restos semejantes. Kl resultado del reconocimiento preliminar ha sido el poder confirmar la existencia de la mayor parte de las regiones es- queléticas 6 de huesos sueltos correspondientes 4 los ocho 6 nueve ejemplares que, por tener muchas de sus partes carac- teristicas representadas al natural, se han reputado como ar- mables, formando el nucleo de mayor atractivo de la coleccién y quedando representaciones de varias otras especies no me- nos interesantes para el estudio, sdlo que demasiado incom- pletas para suministrar exacta idea de lo que pudo ser el es— queleto completo, quiza desconocido para la misma Ciencia. Otro grupo de materiales esta formado por huesos que son re- peticiones, en aletin caso numerosas, procedentes de distintos individuos, ya mejor representados dentro de la coleccién, siendo éstos precisamente los que mas tiempo suelen exigir para su reconocimiento, si bien en ocasiones esta labor se re- compensa por proporcionar materiales con que completar al- gunos de los esqueletos armables. Modeladas con anterioridad varias piezas complementarias para el efecto de conjunto, se echan de menos algunas otras cuyo arreglo tendria que hacerse antes del montaje, siguiendo el criterio adoptado en los museos en casos analogos, y que juzgamos indispensable tratandose de‘una coleccién dedicada en primer término a popularizar la ciencia. Por las adjuntas notas podra formarse una idea aproximada de la importancia de la coleccién asunto de esta nota, cuyo estudio descriptivo y particular de cada una de las especies exigen circunstancias y medios de que no disponemos en la actualidad (1). (1) Seguimos en la denominacion y ordenacién de los géneros el 7ratado de Pa- leontologia del profesor Zittel (Mammalia). DE HISTORIA NATURAL. 85 Gravigrados. Megatherium Cuv.—Rio Sanborombon. Esqueleto armable en muy buen estado de conservacidén, que ofrece las siguientes regiones completas: la sacra y cau- dal, la calavera, el esternén, todas las piezas correspondientes a una de las extremidades anteriores y todas las de otro miem- bro posterior, incluso la rétula, existiendo otras varias regio— nes casi completas y cuatro piezas de las cinco que componen el hioides, muy raro en las colecciones. Ademas de este ejemplar, clasificado como de IW. america- num Cuv., hay otro de mayores dimensiones, representado principalmente por piezas de las extremidades, vértebras cau- dales y algunas costillas. Mylodon Owen. Clasificado como MW. gracilis Burm., aparecen como de-un mismo individuo buen nitmero de huesos de las extremidades anteriores, varias vértebras y costillas, pelvis y algunas piezas correspondientes a una extremidad posterior, entre las que se ve el astragalo con su caracteristica faceta aplanada, sobre la que descansa la tibia, que también existe. Faltando, entre otras partes, la calavera, de la que tan solo restan algunas muelas, no se incluye este esqueleto entre los armables, sino es que, como se espera, aparezcan algunos huesos de otro U otros in- dividuos que figuran como embalados. Scelidotherium Owen. Existen en la coleccién dos individuos bastante completos, y ademas hay muchas piezas procedentes de otros en muy diferente estado de conservacién y de diferentes especies, con- firmandose con ello lo dicho por los autores, de que los restos de este género de Miloddntidos son muy abundantes en los yacimientos del rio de la Plata. Llaman la atencién las cala- veras por lo prolongadas, midiendo una de ellas la longitud de 0,52 m. por 0,19 m. en su mayor anchura, 6 sea en un did- metro correspondiente a la terminacion de las apofisis zigo- miiticas en la parte que corresponde al temporal; arcos incom- pletos, que en su mayor porcidn 6 pomular y vistos desarticu- lados, se asemejan a la cuerna de un gamo 6 paleto, con tres dentellones dirigidos hacia atras. La articulacion con el atlas 86 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA las coloca forzosamente dirigidas muy hacia abajo, quedando una ancha superficie de insercion para los musculos cervicales. Uno de los esqueletos mas completos y mejor conservados de la coleccién, y que por esto se ha principiado ya a montar, corresponde precisamente 4 un individuo procedente de Rio Salado, que el Sr. Carles estiméd como de especie inédita (1). Otro de los esqueletos fué recogido en el Plata con varios res- tos bastante averiados, asi como algunas de las piezas aludi- das, todo lo que se refiere al S. magnum Brad., recogidos en la laguna Adela. Gliptodontos. Glyptodon Owen. Dos hermosas corazas representan principalmente a este gé- nero: una hemisférica, casi terminada en su reconstruccidn, vy ala que hay que anadir una calavera que podra restaurarse, y la pelvis, procedente del Plata, y otra del todo terminada, que es algo prolongada, como un transito en esto al g@énero que sigue. La acompana la cola completa, que recuerda por Su aspecto y dimensiones @ los pinaculos géticos; la pelvis y algunos huesos de las patas, recogidos en Rio Salado. Hoplophorus Wand. Los restos de los animales de este g@énero aparecerian cu- biertos enteramente por la coraza, que ocultaria interesantes partes del esqueleto si éstos no se montaran por separado. Tres son, cuando menos, las especies que figuran en la coleccién, siendo la mas completamente representada una de forma iné- dita, segtin el Sr. Carles, 4 la fecha de la entrega de los ma- teriales, y que procede del rio Sanborombén. El complemento estriba, sin embargo, en la existencia de partes correspon- dientes 4 dos distintos individuos, perteneciendo 4 uno la co- raza restaurada y con una abolladura natural, el tubo lumbar, algunas vertebras caudales, parte de los anillos dermatoesque- léticos que caracterizan el arranque de la cola y el tubo ter- minal de ésta. Son de otro individuo algunas otras vértebras, los principales huesos de los miembros y algunos del pie. Otra de las especies se refiere al H. ovnatus Burm., de la que (1) 1.° de Enero de 1889. DE HISTORIA NATURAL. 87 se conservan por lo menos una coraza integra, el craneo res- taurado con el escudo que le protegia, los preciosos anillos caudales que anteceden al tubo terminal, el cual también exis- te, la pelvis y otros huesos sueltos del mismo individuo, reco- lectado en el Plata. Hay ademas una coraza de igual proce- dencia clasificada como del ZZ. scrobicurvatus 2 artes deterioradas de craneo y de la mandibula inferior, dientes sueltos, pelvis, grandes y pequenos trozos de cora- zas, etc., forman una buena parte del material de conjunto, que puede considerarse como repetido, aun cuando tenga que someterse todo ello 4 un mas detenido reconocimiento. Dedicurus Burm. Entre los escasos restos que de este g@énero posee la colec- cion se hallan dos tubos caudales caracteristicos, muy nota- bles por su gran desarrollo, la forma roma y deprimida con que terminan y su considerable peso, correspondiendo el me- jor conservado a una pelvis reconstruida y a punto de mon- tarse. Dasipodidos. Hutatus Gerv.—Rio de la Plata. A este genero pertenece otro de los esqueletos que avaloran la coleccion por haberse considerado como de especie inédita, siendo de lamentar la total carencia de piezas dermicas que tanto distinguen entre si las especies de este grupo natural. La pequeiiez del individuo y el conservar la mayoria de sus huesos, incluso su completa calavera, hizo sin duda que se eligiera para modelo de montaje, pero de modo provisional, por lo que habra que rehacerlo para dar estabilidad al articu- lado de sus piezas. Es ademas interesante por la gran robustez de sus miembros, provistos de exageradas apOfisis, crestas y rugosidades, que contrastan con lo delicado de otras regiones. Del #. Seguini Gerv. hay algunos huesos. Perisodactilos. Equus L. Los restos de este género no tienen otra importancia que la de atestiguar la existencia en el Sur de América de alguna de las especies de caballo, con mucha anterioridad a la importa- cién del doméstico hecha por los espanoles. §8 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Macrauchenia Owen.—Rio Sanborombon. Los huesos corresponden a la JZ. Patachonica Owen, y repre- sentan un individuo de gran talla, aunque joven, segin el estado de epifesis en que se hallan las terminaciones de los huesos largos de los miembros posteriores y también las caras articulares de las pocas vértebras existentes, 4 lo que hay que anadir la pelvis, un pie completo y otro en su mayor parte res- taurado, mas algunas otras piezas hasta la fecha no encon- tradas. Artidactilos. Cervus L. No tienen importancia sus restos ni por el niimero ni en lo tocante al propdsito que nos guia 4 dar las presentes notas, tratandose de un género tan extendido como rico en formas, tanto fosiles como vivientes. Proboscideos. Mastodon Humboldti Cav.—Rio Sanborombon. Solo existe un colmillo, dificilmente reconstruible por el es- tado de disgregacién en que se halla el marfil. Toxodontos. Toxrodon Owen. Una calavera restaurada muy notable con cuatro muelas naturales de los maxilares superiores; pero por desgracia en la mandibula inferior sdlo pueden verse los restos de alguna raiz de molar, faltando de sus anchurosos alvéolos todos los dientes. Tipoteridos. Typotherium Brav. Los restos mis notables se refieren 4 los craneos y 4 diferen- tes trozos de mandibula correspondientes 4 dos 6 mas espe- cies, entre las que se cuenta el 7’. cristatum Serres, represen- tado por dos craneos restaurados con una mandibula incom- pleta. Otros dos craneos también restaurados pertenecen a otra especie distinta. DE HISTORIA NATURAL. 89 Carnivoros. Arclotherium Brav. Los restos de este oso americano carecen de importancia. Machairodus Kaup.—Rio de la Plata. Ksqueleto inédito y de los que pueden armarse, si bien falta la region toracica, los omoplatos y la parte de las garras pro- piamente dichas, estando rotos los colmillos. que tanto carac- terizan a esta fiera, por la rasante misma del borde alveolar, y existiendo algunas piezas de diferentes individuos. Primates. Homo \..—Rio Sanborombon. Cuanto se refiera 4 la historia natural del hombre ha de ser interesante; pero aumenta el interés al tratarse de un esque- leto no estudiado, aunque de procedencia indudablemente fosil y admitida por los autores ya sin recelo, como contem- poranea de los grandes mamiferos desaparecidos y que en esta coleccion hemos encontrado en la misma localidad y circuns- tancias. Por desgracia el esqueleto se halla tan fragmentado, que su reconstitucioOn ha de ser uno de los trabajos mas largos y comprometidos, si bien merece todo esta atencién segtin la nota puesta por el Sr. Carles de que es «el tnico tan completo de América». Del golpe de vista sobre tan delicados restos se deduce que pertenecié 4 un individuo adulto y masculino, segun la pro- porcion longitudinal del fémur, de raza dolicocéfala, a juzgar por el hueso occipital casi completo, y aun cuando falta el frontal y algun otro de los huesos del craneo; que su mandi- bula inferior muy robusta é integra ofrece la barbilla 6 sinfisis mentoniana, asi como el angulo de la rama ascendente, con las inclinaciones al parecer ordinarias en nuestra raza, y que en la cara posterior de dicha sinfisis aparecen bien desarrolla- das las apofisis genisuperiores, mas no las inferiores, pudien- do sospecharse si estaran reunidas en una a cada lado las cua- tro que caracterizan a las razas modernas. De confirmarse la ausencia de tales apéfisis correspondientes al musculo genio- hioideo, bien diferenciado en sus funciones del genio-gloso 90 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA en las razas actuales, se aumentaria el interés del esqueleto que nos ocupa por los corolarios consiguientes relacionados con el lenguaje hablado. Kn cuanto ala dentadura, se repite una vez mas la sospecha de que algunas de las razas arcaicas se alimentaban con pre- ferencia de raices cuya tierra, mal separada, ocasionaba por la masticacién un desgaste igual para los incisivos como para los caninos y muelas entre ambas mandibulas, que es lo que se observa en el presente caso. (Juedan por enumerar muchisimos otros restos que desde el punto de vista puramente cientifico enaltecerian al gabinete 6 museo donde se colocaran, no ya sélo tratandose de colec- ciones tan deficientes como suelen serlo las de nuestros cen- tros docentes, sino aun en los establecimientos mas ricos é importantes del extranjero.» —Kl Sr. Pau, de Segorbe, remite la siguiente nota: «Cistaceas curiosas de Segorbe. Presentandose en este pais con abundancia algunas jaras, pero sin llegar ni con mucho 4 formar extensos jarales, como en algunas regiones andaluzas y castellanas, dediqué los pri- meros dias del mes de Mayo al estudio de «Monte mayor» y «Monte Malo», montanas en donde podian darse hibridos, como en efecto comprobé. Pero antes de mencionarlos citaré las jaras del valle segorbino. Cistus Clusti Dun.—Abundantisimo en toda la parte baja y sin crear hibridos. C. monspelicnsis ..—Abunda en el rodeno, sin descender a la parte baja. C. albidus L.—¥Forma «estepares» y no produce hibrido aleuno. C. salviefolius L.—No es frecuente mas que en rodales y estos escasos. Hscapado es muy raro. Prefiere el rodeno y gra- nito; en la caliza no lo he visto, se entiende, en este valle. C. populifolius L. b) lasiocalye Willk.—Unicamente se en- cuentra en abundancia en el «Monte malo» y «Monte mayor». Kn ejemplares aislados es muy raro. Cistus Corbariensis Pourr. 8 grandifiorus (C. populifolius L. b. dasiocalyx Willk. & salviefolius L.) DE HISTORIA NATURAL. 91 Es abundante esta forma en las laderas del «Monte mayor» y junto al mismo camino que conduce de Tristan 4 Porta-Coeli; en el «Monte malo» no pude descubrir mas que un solo pie. Se presenta bajo dos formas: la planta del «Monte mayor» ofrece los pedunculos generalmente unifloros y menores las hojas; la muestra del «Monte malo» es 2-3 flora y mayores las hojas. Lo restante resulta idéntico. Hay que suponer que difiere la planta espanola de la fran- cesa, porque ni la variedad /asiocalyx Willk. se encuentra en Narbona, ni la variedad Narbonensis Willk. en Valencia; lo cual debe suceder con el siguiente hibrido (C. longifolius), a pesar de no haberlo podido recoger con flores. Difiere la variedad valenciana del hibrido tipico francés por las hojuelas del sobrecaliz, doble mayores y lanceolado el apice. Cistus longifolius Lamk. & grandiflorus (C. monspeliensis po- pulifolius b. lasiocalyaz.) Tres son los ejemplares de este hibrido que poseo de la mis- ma localidad clasica y recogidos por Timbal, Neyra y Pons. Nuestra forma difiere ligeramente de las dos tltimas, pero es idéntica a la de Timbal; salvo que el ramo que constituye el unico ejemplar de mi herbario carece de flores. Un solo pie muy desarrollado, sin flores ni frutos, en tierras abandonadas por el cultivo en el reguero que mira al Norte del «Monte malo». Los autores han reputado como dudosa su existencia en nuestro pais. Véase Willkomm, Je. p/., p. 34; Laguna #7. fores- tal, p. 417. Cistus valentinus Pourr.—C. forentinus Lamk. (C. monspe- liensis L. salviefolius 1.) Las flores de una a tres en el apice de los pedunculos distin- guen bastante bien esta forma hibrida del C. monspeliensis, a la que se parece mucho, por lo cual no es de extranar que algunos autores la dieran como variedad; lo mismo se puede separar por sus ramos difusos, enmaranados, echados, débi- les y hojas doble mas cortas y con los nervios laterales mas breves. Ks muy facil en el monte confundirla con el C. monspelien- sis, pero no con el C. salvie@folius. Rarisimo en la solana de «Monte malo». 92 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Fumana hispidula Loscos de Pardo 8 pabularis. Difiere del tipo por sus ramos lampinos, rojizos, echados, enmaranhados, entrenudos superiores mucho mas largos; hojas menos revueltas, las ultimas cerdoso-pestanosas, las restantes lampinas; inflorescencia glanduloso-pubescente. Planta ape- tecida por el ganado, lo que no creo suceda con otra forma del eénero Fumanda. Junto a los caminos ‘de los montes antes de llegar 4 la me- sada de «El Gabado». Probablemente esta variedad corresponde al Helianthemum viride Ten.—Pumana viscida Sp. 6) viridis Willk., no indicada hasta el dia en Espana; por mas que algunos autores creyeron que los #/. viride Ten. y Cistus levis Cav. eran sindnimos. No obstante, mis recolecciones posteriores me permiten suponer que bajo el nombre de Z. viride Ten. se han dado otras formas que recogi entre Javea y Gata (Alicante), pertenecientes a un hibrido (Fumana viscida X levipes). Recientemente be recibido de colectores extranjeros muestras que las creo ZZ. Barrelieri y Fumana hybrida. ; Fumana racemosa. —- F. Spachti x viscida.— IF. ericoides 8 glandulosa Pau ml. bot. fasc. 1, Willk. suppl. p. 292. Sufruticosa, enmaranado-cespitosa, de unos 30 cm., muy ramosa, ramos derechos, los jévenes glanduloso-pubérulos en toda su longitud; hojas sentadas, sin estipulas, lineales, lige- ramente mucronadas, pestahosas, amontonadas en la base, remotas superiormente; flores en racimo larguisimo, con brac- teas de 3 mm. 1., pedinculos de 15-20 mm. densamente pubé- rulos; piezas del sobrecaliz tres veces menores que los sépalos; pétalos sulftireos. Planta muy parecida a /. Spachii = F. ericoides (Cav. sub Cisto), de la cual difiere por su vestidura y reacimos cuatro 6 cinco veces mas largos que la base hojosa, invalidando uno de los caracteres en que se han apoyado los autores para dividir en dos secciones el @énero Humana. Y por esta causa, a no admitir que Willkomm no conocidé esta forma, no me explico como pudo decir (Suppl., p. 292, n. 4571): «vix varietas di- cenda». Aprnpicrk.—Entre las otras plantas curiosas que he podido ver en estas cercanias con motivo de buscar los hibridos del rénero Cistus, pueden indicarse en el «Monte malo» la ilago ( Sai DE HISTORIA NATURAL. 93 minima Fr., nueva para la flora valenciana y que nunca la habia visto; una forma parviflorum del Antirrinum calycinum Lamk. (1), notable porla cortedad de la corola. Ademas, fuere de este monte, he hallado con abundancia el Lathyrus ciliatus Guss., que ya el ano 1886 recogi en Segorbe y castillo de Sa- gunto; la Ononis sicula Guss., abundantisima junto a los mu- ros de la ciudad, y con la cual no pude dar desde el ano 1886, después de haberla buscado con insistencia en La Loma. Esta especie también la recogi el afio 1886 en el castillo de Sagun- to, y diez anos después en el castillo de Jativa; pero muy escasa. En Tristan y Monte mayor todavia subsisten las mismas es- pecies que otras veces habia alli recogido é indicado, y unica- mente traje de nuevo la Hrica scoparia L. Subi al Alto del Sapo porque se me habia dicho por los pas- tores que su cumbre era caliza y no de rodeno como los mon- tes vecinos; efectivamente, aquella cima consiste en un resto calizo del terreno jurasico que cubria estos montes; pero no pude dar alli con ninguna planta curiosa después de una as- censién algo penosa. E] Alto del Sapo tiene menos altura que el Monte mayor, y en su cumbre se reunen los términos de Porta-Coeli, Serra y Segorhe: y entre el Alto del Sapo y el Monte mayor se origina el famoso Barranco de la Jara, nota- ble por la riqueza de sus arboles frutales. Como queda tan apartado de Segorbe, generalmente es explotado por los pue- blos de la Baronia. Si no temiera dar a esta nota extensién exagerada, apuntaria aqui algunas observaciones sobre la vegetacioén en el réddeno y en el calar 6 terreno calizo. Indicaré solamente que el rodeno es mas abrigado; puede calcularse en quince dias el adelanto de las plantas, lo cual quiza explicara la presencia de alguna forma meridional en regiones mas frias, como sucede con el Cistus monspeliensis de las Pehas Royas, entre Gea y Albarra- cin. También este mismo calor del r6deno consume en pocos dias toda la veretacién herbacea y anual, sin dejar casi rastro (1) La creo variedad del A. calicynum Cam. y no del A. Orontium L., considerando al primero como subespecie, y debe pertenecer al A. parvifiorum Lge. (A. microcarpum Pornel), forma que no se conocia en Espana mas que en Andalucia. 94 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA de la vestidura que lo cubria; por esta causa, 4 mi entender, los alcornoques del Monte mayor aparecen raquiticos, enfer- mizos, amarillentos, por haber arrancado las malezas, bien diversos de los hermosos alcornoques de la Jabonera, en donde las malezas impiden el paso al cazador. Es posible que en te- rreno calizo la practica de los de Serra sea util; en el rédeno la cred perjudicial.» —KEl Sr. Calderén leyé lo siguiente: «Columbretes» y dntus usque medium minute crenulata. Long..corporis J 15": pron. 1,9"8; fore: crura 2,75; 2 14 y- 5 ; yo: Tenerife.—Baja mar, 1x, 1898. Anatael Cabrera.» —lKl Sr. Rivas Mateos, de Santiago, remite los siguientes ‘Datos para la flora gallega. E1 territorio galleg@o ha sido objeto de estudio por distingui- dos naturalistas, tales como Juan Salvador, Fr. Martin Sar- miento, el abate Pourret, y posteriormente por el catedratico D. José Planellas y Giralt, que en 1852 escribio una obra titulada Husayo de una flora fanerogamica gallega, \a cual, si bien es verdad deja hoy mucho que desear, por la inexactitud 100 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA de algunas descripcioues y por sus muchas omisiones, tam- bién es cierto que atin sirve de base para los botanicos que estudian la flora gallega, encontrandose en dicha obra reco- pilados casi todos los trabajos del insigne botanico Fr. Sar- miento. Modernamente merece citarse al laborioso é inteli- gente botanico el P. Merino, de la Compania de Jestis, quien, después de detenida observacién, publied un Catdlogo critico de la vegetacion espontanea de la cuenca extrema del rio Mino, catalogo muy curioso y notable porque, ademas de citar las especies segin han aparecido en el transecurso del ano, des- cribe algunas plantas nuevas recolectadas por él en dicho terreno. En nuestras excursiones hemos encontrado algunas formas locales curiosas, dignas de ser estudiadas, y entre ellas las siguientes: Scilla Monophyllos Lk. t. genuina.—«Bulbo pardo, tunicado, con una 6 rara vez dos hojas envainando la base del escapo, que es de 10"-15" aguda y acanalada; 6-20 flores en corimbo y al fin en racimo flojo con bracteas azules, puntiagudas, mu- cho menores que los pedtnculos; sépalos y pétalos azulados 6 blancos con linea dorsal verdosa, mas largos que los estam- bres». Flora espaiola, B. Lazaro, t. u, p. 139. La forma local a que nos referimos puede denominarse ma- culata, encontrandose en las praderas nortes del monte Pedro- so (Santiago). Hoja manchada con puntuaciones negruzcas de margen violacea; bracteas azules algo obtusas en el apice. Marzo. Phalangium bicolor Dest. f. geanina.—«Tallo desnudo, ra- moso en el Apice; hojas planas, lineares, agudas, mas largas que el escapo; panoja floja con bracteas mas cortas que los pedunculos; sépalos y pétalos elipticos: filamentos inferior- mente lanudos; flores blancas interiormente vy al exterior pur- pureas». Flora gallega, Planellas, p. 379. No es esta la forma mas comun en los alrededores de San- tiago ni en los montes préximos a la cuencasdel Hulla; puede denominarse f. currifolia. Hojas lineares acanaladas y encor- vadas en la mitad anterior; panoja constituida por 3-8 flores blancas interiormente y con una linea dorsal verdosa en el exterior.— Abril-J unio. Lythrum Salicaria L.—«Vallo erguido de 6'-10', rigido, sen- DE HISTORIA NATURAL. 10] cillo, con 4-6 angulos; hojas de 5’-8" lanceolado-agudas, con nervios laterales confluentes; flores purpurinas bastante gran- des en espiga terminal interrumpida en la base; pétalos elipti- cos; capsula oval oblonga». Lazaro, Flora espaiola, t. u, p. 393. Esta especie es comtin en las margenes de los arroyos de toda la regién. Dos formas muy curiosas podemos citar: f. se7- ratifolia, hojas aserraditas, por lo menos las inferiores de las ramas, con la base acorazonada 3 6 4 verticiladas; tallos ergui- dos 4-6 angulosos; flores blancas por lo comin, rara vez pur- purinas. Cabodeiro (isla de Arosa). Meixonfrio (Santiago). f. alata; esta forma local es muy rara, pues sdlo la hemos visto en un arroyo proximo a Marin (Pontevedra). El caracter esen- cial es el presentar el tallo biaristado con las aristas ensan- chadas a modo de alas.—Julio, Agosto. Cardamine hirsuta L.—«Tallo de 1’-3'; hojas pinnadas, las radicales con divisiones casi vedondas, sinuoso-angulosas; la terminal arrinonada; las caulinares con 2-3 divisiones oblon- was; pétalos blancos, dob/e Jargos que el caliz». B. Lazaro, Flora espanola, t. u, p. 381. f. cwrulescens: no es dificil encontrar esta vulgarisima especie con la parte marginal del pétalo algo azu- lado, unica diferencia que la separa de la forma genwina. — Al- rededores de Santiago. Febrero, Marzo. Silene maritima With.—«Difiere del Silene inflata L. por sus ramas cespitosas, tendidas; hojas lanceoladas con margen, cartilaginosas, y pétalos con dos escamitas acuminadas en la garganta». B. Lazaro, Flora espanola, t. u, p. 533. La forma @ que nos referimos puede denominarse f. fomen- fosa, cuyos caracteres son los siguientes: planta cespitosa, con los ramos tendidos y plagados de un tomento denso; hojas car- nosas, lanceoladas las superiores, algo espatuladas las infe- riores y con un tomento laxo; pétalos blanquecinos con dos escamitas acuminadas en la garganta.-—Frecuente en los are- nales de la ria de Arosa ( Villagarcia, Isla, Santa Kugenia, etc.) Agosto. Las especies recogidas hasta hoy en nuestras excursiones, y no citadas en la Flora gallega del Sr. Planellas, son las que enumeramos a continuacion (1): (1) Para la clasificacion de estas especies hemos hecho uso de la Flora espatola del Dr. Lazaro. 102 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Clematis recta L.—Isla de Arosa. Ag‘osto. Thalictrum tuberosum L.—Villagarcia. Agosto. Ranunculus pellatus Schr.—Santiago. Marzo. Cakile monosperma Lee.—Villagarcia. Agosto. Tberis amara L.—Isla de Arosa. Julio. — linifolia L.—Idem id. Senebiera coronopus Poir.—Coruna. Julio. Astrocarpus suffruticosus Lge.—Santiago. Mayo. Ulex Jussieu Webb.—Cacheiras, Santiago. Febrero. Cytisus albus L.—Padron, Santiago (Monte Pedroso). Mayo. Eryngium Bourgati Gouan.—Isla de Arosa. Agosto. Centaurea aspera L.—Villagarcia. Julio. = Cyanus L.—Santiago. Mayo, Junio. Asphodelus cerasiferus Gay.—Toda Galicia. Junio. Narcissus moschatus L.—Monte Pedroso, Meixonfrio (Santiago). Marzo.» —ll Sr. Fernandez Navarro envia la nota siguiente: «Ligeras observaciones sobre la nomenclaltura castiza de los minerales. Una de las causas que dificultan toda clase de estudios y trabajos mineralogicos es la confusion y muchedumbre de nombres con que se designan las especies y variedades asunto de esta ciencia. No es empresa facil, ni mucho menos, la de modificar esta nomenclatura fundandola sobre bases racionales que la uni- fiquen y la revistan del austero caracter cientifico que ha al- canzado en las demas ramas de la Historia natural. Para esto seria preciso, en primer término, dar a la palabra especie una significacién determinada que se aceptase por todos los mine- ralogistas, y bajo esta base hacer una dificilisima revisidn de todos los nombres mineraldgicos. Vese, pues, que tal empresa es superior al estado actual de la mineralogia, y que, aun cuando ésta alcance el grado de adelanto necesario, no podra nunca ser obra de un solo sabio por mucha autoridad que tenga. Pero si esto no es factible, si lo es el no complicar mas dicha nomenclatura, procurando que en lo sucesivo se fijen bien los nombres de los minerales, haciendo resaltar las diferencias de los que pudieran confun- DE HISTORIA NATURAL. 108 dirse y eligiendo los mas adecuados para aquellas especies que puedan ser designadas con varios términos, etc., etc. Tal es el asunto, no desprovisto de interés, 4 mi entender, sobre el que me permito llamar la atencién de la Sociedad, por ser muy adecuado a los fines de ésta, y mucho mas en nuestro pais, en que apenas si esta empezada a formarse la nomenclatura cientifica. Otras personas de reconocida autori- dad podran, si lo juzgan conveniente, anadir nuevas observa- ciones a las por mi consignadas y modificar lo que yo propon- vo, como en su criterio lo juzguen preferible. Me daria por satisfecho con que la modesta nota presente contribuyera a que algunos de los que sobre mineralogia escriben en Espana procurasen en sus trabajos adoptar un criterio fijo respecto a los nombres de los minerales. Dificulta mucho a veces la redaccién de trabajos en que in- tervienen nombres de varios minerales, la ortografia de éstos. Ks asi muy frecuente tener que perder no poco tiempo consul- tando libros, tanto mas cuanto que, siendo tan comunes los tomados de apellidos de naturalistas, y siendo éstos de paises muy diversos, no haria falta nada menos que conocer todos los idiomas para recordar sus ortografias. Creo que lo mas conveniente, para salvar semejante dificultad, seria escribir- los tal y como en castellano se pronuncian. En su consecuen- cia, los nombres de los minerales que como ejemplo pongo a continuacion, se escribirian igual a4 los que van en letra bas- tardilla: Berzelina, Bercelina; Bjelkita, Je/quita; Bournonita, Burno- wita; Chiastolita, Quéastolita; Christianita, Cristianita; Kaolin, Caolin; Kapnita, Capnita; Keilhauita, Queilauita; Kerargira, Querargira; Kieserita, Quieserila: Kobellita, Cobelita; Mispikel, Mispiquel; Perowskita, Perusquita; Phenacita, Fenacita; Tha- lackerita, Za/aquerita; Wollastonita, Volastonita. De la misma manera convendria, a mi entender, escribir con / 6 con s aquellos nombres que en otros idiomas empiezan por #, letra para nosotros de dificil pronunciacion al principio de palabra, por ejemplo: Xanthophyllita, Santofilita; Xenotima, Senotima; Xylotilo, Silotilo. Por ultimo, tratandose de nombres como el de Hornblenda, 104 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA se podria facilitar su pronunciacion aumentando 0 quitando alguna letra. y escribiendo Horblenda i Hornablenda, prete- rentemente esta Ultima palabra. que ha sido va usada por varios autores, Aquellas especies 6 variedades que pueden designarse indi- ferentemente con nombres de una sola 6 de varias palabras, convendria siempre que se hiciera por los univocos, como en los ejemplos siguientes: Piedra de las Amazonas. Lmazonita; Alabastro de yeso, Ala- hastrites ; Calcita nacarada, 4/ri/a; Espato pesado, Baritina: Cobalto gris, Cobaltifa; Plata antimonial, Discrasita: Sal de La Higuera, Hpsomita; Plata roja, Pirargivita; Plata cornea, Querargird. Esto no siempre sera posible, pues hay especies y varieda- des para las que no existe nombre univoco, como, por ejem- plo, el Corcho de Montana, vy el crearle seria mas bien complh- car aquello cuya simplificacidn buscamos. Por la misma ra- zon prefeririamos el nombre de Sa/ gema al de //a/ita para el cloruro de sodio, por ser universalmente usado aquel y poco conocido este. Puede ocurrir que los diferentes nombres empleados para designar un mineral sean todos univocos, y entonces es mayor el embarazo para elegir el que debe emplearse. Creo que en estos casos no debe atenderse principalmente a la prioridad en el uso, sino que tiene ventajas positivas el seguir un crite- rio mas bien ecléctico, escogiendo el nombre mas general- mente usado y que se preste 4 menos confusiones: se preferi- ran los que se refieran a localidades 6 naturalistas sobre los que aluden a propiedades, pues éstas nunca son exclusivas de na especie mineral. Asi, por ejemplo, los nombres Cordierita, Dicroita, Jolita y Pelion designan una misma especie; pues bien, descartados los dos ultimos por ser poco usados, creo preferible el primero dedicado al naturalista Cordier, porque el segundo expresa una propiedad (dicroismo) comin a todos los ininerales monoaxicos, por mas que aparezca muy ostensible en el ahora mencionado aun a la simple vista y a la luz natural. En algunos casos atin se dificulta mas la eleccidn del nom- bre especifico, porque las diversas palabras se han empleado DE HISTORIA NATURAL. 105 generalmente para determinadas variedades de una misma especie: tal ocurre con los nombres Apatito, Fosforita y Espa- rraguina. In este caso puede elegirse como especifico el mas general (que aqui seria el de Apatito), conservando ademas el de Fosforita para las variedades compactas 6 concrecionadas fosforescentes, y el de Esparraguina para las cristalizadas de color verde. Como el razonar todos los casos que pueden ocurrir aumen- taria extraordinariamente la extension de esta nota, me limito a poner a continuacidn los diferentes nombres de algunos ejemplos, escribiendo en primer lugar el que creo debe usarse preferentemente. Anhidrita, Vulpinita, Carstenita, Piedra de tripas, Bardi- gliona. Antimonita, Estibina. Blenda, Esfalerita, Falsa galena, Marasmolita. Borax, Tincal, Atincar. Calamina, Hemimorfita, Piedra calaminar. Corindon, Corundo, Zafiro, Harmofana. Distena, Cianita, Reticita, Lapparita, Chorlo azul. ispodumena, Trifana, Hidenita. Ceolita de Suecia. Fluorita, Fluorina, Clorofana, Espato fluor, Espato fusible, Ratofquita. Grafito, Plombagina, Plumbago, Lapiz plomo. Hidrocincita, Cinconisa, Calamina terrosa. Flor de zinc. Hulla, Hornaguera, Carbon de piedra. Ilvaita, Lievrita, Yenita, Verlita. Leucita, Leucolita, Anfigena, Granate blanco. Limonita, Hematites parda, Hierro pardo. Magnetita, Hierro magnético, Iman natural, Ferroferrita. Nefelina, Davina, Carolinita, Beudantina. Sommita, Pin~ ouita. Oligisto, Hematites roja. Hierro rojo. Peridoto, Olivino, Crisolita de los voleanes, Limbilita. Pirargirita, Argiritrosa, Plata roja obscura. (Juerargira, Cerargirita, Plata cornea. Rejalgar, Sandaraca, Arsénico rojo. Siderita, Siderosa, Hierro espatico, Mena de acero, Titanita, Esfena, Ligurita, Pictita, Semelina. Ulexita, Boronatrocalcita, 106 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Vesubiana, Idocrasa, Egeran, Loboita, Cipsina, Crisolita de Napoles, etc. Yeso, Espejuelo, Selenita, Espato selenitoso. Zoisita, Estralita, Fluderita, Chorlo verde. Mayor importancia tiene todavia el fijar bien la significa- cién de aquellos nombres que pueden usarse con varias, de los cuales tenemos en castellano algunos que, como el de Ca- lamina, originan manifiesta confusién. Los mineros le apli- can indistintamente 4 todas las especies oxidadas de zine ex- plotables, y con él se describen en diversas obras espanolas, ya el silicato hidratado, ya el carbonato anhidro 6 el hidratado. El nombre de Calamina, del Lapis calaminaris de Agricola, pertenecié en realidad siempre al hidrosilicato. Pero Delafosse y Leymerie, a ejemplo de Miiller y Phillips, describieron con aquel el carbonato anhidro, fundandose en que en la mezcla calaminar explotable suele dominar mas el carbonato (aunque no ciertamente el anhidro). Como la obra de Delafosse ha sido quiza la mas consultada por nuestros mineralogistas, se ex- plica bien esta acepciédn, que no es en la que en realidad de- ben usarse las palabras EKsmitsonita y Calamina. En conse- cuencia, estos nombres se deben emplear en las acepciones siguientes : Calamina, para el hidrosilicato; Esmitsonita, para el carbonato no hidratado; y Cinconisa, para el hidrocarbo- nato, aunque quiza para este ultimo sea mas acertado emplear la palabra Hidrocincita, que le distingue perfectamente del carbonato anhidro. Un nombre que también, por dar lugar 4 confusiones, debe desterrarse, es el de Magnesita. Designanse con él el carbonato de magnesia romboedrico y el silicato hidratado de la misma base, al que también se llama Espuma de mar. La confusion puede evitarse dando 4 este Ultimo el nombre de Sepiolita, que usan de preferencia los alemanes, y distinguiendo el carbo- nato con el de Giobertita, dado por Beudant al dedicar esta especie a Giobert. Con la palabra Filipsita puede designarse, 6 bien un sulfuro ctibico de cobre y hierro (Bornita, Erubescita, Cobre abigarra- do), 6 bien una ceolita monoclinica aluminico-calcica, 4 que también se da el nombre de Cristianita y de Harmotoma cal- cica, Hay ademas otra ceolita monoclinica aluminico-barica . DE HISTORIA NATURAL. 107 (Kreutzstein, Morvenita), que es la que los alemanes llaman propiamente Harmotoma. Nace de aqui una gran confusién, que a mi modo de ver podria evitarse reservando el nombre de Harmotoma para esta ultima y desterrando el de Filipsita, lo cual puede hacerse llamando Cristianita a la ceolita alumi- nico-calcica y Bornita (seguin propone Dana) al mineral de cobre y hierro. Hay también muchos nombres que desde luego deben su- primirse, porque no siendo necesarios inducen a error con sus variables significaciones. Tales son, como ejemplo, los siguien- tes: Diaforita, que se aplica a una alteracién de la Rodonita v a una variedad de Freieslebenita; Edelforsita, empleado para designar una variedad calcifera de Hornablenda, para otra de Lomonita y para una Volastonita impura; Edmannita, que se usa para una variedad ferrosa de Circén y también para una de Ortita 6 de Datolita; Hallita, sindnimo de Vebsterita, lla- mandose asi igualmente una variedad alterada de Flogopita; Leucolita, nombre que se da al Dipiro y a la Picnita 6 Topacio bacilar; Rosita, sinédnimo de Roselana (variedad de Anortita) y de Volfsbergita (también Calcostibita); Succinita, empleado como sinonimo de Succino, y asimismo para una variedad de Grosularia, etc. Aquellos nombres que, ademas de una significacion en que son generalmente adoptados, tienen otra como sindnimos de especies que a su vez reciben otras denominaciones, no debe- ran ser empleados mas que en la primera. Tales son, por ejem- plo, Oisanita (sinédnimo de Anatasa), Volastonita (sindnimo de Pectolita), Dufrenoysita (sindnimo de Binnita), ete. Deberan, por Ultimo, desterrarse los términos que, como Crisolita, son aplicados 4 varios minerales, anadiéndoles di- versas denominaciones: Crisolita oriental (Cimofana), Criso- lita de Napoles (Vesubiana), Crisolita de los volcanes (Perido- to), Crisolita del Cabo (Prehnita), Crisolita ordinaria (Apatito), Crisolita de Espana (Ksparraguina), Crisolita de Sajonia (To- pacio). Otro tanto puede decirse de las palabras Espato (calizo, cambiante, pesado, fluor, diamantino, de Islandia, selenitoso, selenitoso de Sicilia, perlado, fusible, ctibico, ete.), Chorlo (azul, negro, blanco, eléctrico, rojo, cruciforme, verde, viola- do, etc.), Ceolita (cubica, azul, dura, anacarada, de Suecia, eflorescente, radiada, roja, tenaz, etc.) y otras varias. 108 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Hare, por Ultimo, algunas indicaciones sobre ciertos nom- bres de minerales que originan confusién, y aunque aparen- temente de poca importancia, no dejan de tenerla por lo to- cante a la dificultad que implican para el que empieza el estu- dio de esta ciencia. Por ejemplo, convendra fijar bien la sig- uificacion de algunos nombres de traduccién dificil, suprimir en lo posible las denominaciones que por su semejanza pue- den originar dudas (6 si no se puede, insistir mucho en las diferencias de denominacion y de significado), distinguir nom- bres que indistintamente se aplican 4 una roca 6 a un mine- ral, etc. De lo primero pueden servir como ejemplo las palabras /ade y Vad. Respecto al valor de la primera, nada cabe ya indi- ‘ar por haber sido dilucidada esta cuestidn por D. Francisco Quiroga en un trabajo (1) excelente, como todos los del inol- vidable maestro. Cuanto a la denominacién inglesa de Wad (que también se emplea en Cumberland para designar el gra- fito), ha sido aplicada a todos los éxidos de manganeso hidra- tados terrosos, mas 6 menos impuros. En realidad no debe considerarse como Vad mas que al perOxido hidratado de man- gvaneso, impurificado por la presencia del hierro y la cal. Asi se distingue de la Groroilita y la Espuma de manganeso, que no tiene cal, de la Seampadita, que contiene cobre, y de la Absolana, que es muy rica en cobalto. Podrian ponerse innumerables ejemplos de denominaciones que por su semejanza originan confusidn, sin que para evi- tarlo haya otro remedio que el de hacer resaltar bien las pe- quenas diferencias que entre ellas existen. Tales son Albina y Albita, variedad de Apofilita y plagioclasa sédica respectiva- mente; Humboldtina, Humboldtita y Humboldtilita, que son respectivamente un oxalato rombico de hierro, un sindnimo de Datolita y una vernerita; Bercelina, Bercelita, Berceliita y Bercelianita, empleados para una variedad de Haiiyna, como sindnimo de Mendipita, para un arseniato hidratado de calcio, magnesio y manganeso, y para un seleniuro de cobre. Cuando una especie mineralodgica puede hallarse en gran- des masas y constituir roca, es conveniente, siempre que no Sobre el jade y las hachas que llevan este nombre en Espana. (ANALKS DE LA Sec. ESP. DE HIST. NAT., tomo x, p 35.) DE HISTORIA NATURAL. 109 haya que aumentar la tecnologia, usar un nombre para cada acepcion. Esto hacen los franceses con sus palabras Ca/eaire vy Calcite, que podriamos traducir nosotros por Ca/iza (roca) y Calcita (mineral). Analogamente se distinguirian la Dolomita mineral de la Dolomia roca. Si se hubiera partido de regilas fijas para la denominacidn de las nuevas especies, se habria evitado la confusién que sobre este punto reina actualmente en la Mineralogia. Pero ya que hoy sea imposible unificar dicha nomenclatura, a los que hemos experimentado sus inconvenientes toca procurar que en lo sucesivo no se complique mas, aumentando las di- ficultades para los que hereden nuestra aficidn 4 esta ciencia. A tal fin tienden las precedentes consideraciones, que no son. como ya dije al principio, sino un ligero boceto de lo que otros con mas inteligencia y conocimientos podrian intentar. Bien entendido, que la adopcidn de las reglas enunciadas y otras analogas no evitara la formacién de extensos léxicos en que resolver las dudas posibles, mientras no pueda llegarse 4 una revision de los nombres mineralogicos.» —Kl1 Sr. Dusmet leyé la siguiente nota: «Algunos Formicidos y Mutilidos de Espaia. Kn el pasado mes de Marzo envié en consulta varios ejem- plares pertenecientes 4 dichas familias al eminente especia-— lista M. Ernest André, el cual ha tenido la extraordinaria ama- bilidad, que le agradezco muy de veras, de clasificarlos. Como la localidad de varias especies puede tener algun in- terés, he creido util formular su lista, en la cual figuran en eran parte los ejemplares cazados por nuestro diligente con- socio D. José Maria de la Fuente, de Pozuelo de Calatrava (Ciudad-Real). Formicidos. Camponotus sylvaticus Ol._—Pozuelo de Calatrava (La Fuente!), — ethiops Latr.—Chinchon (Dusmet)). — cruentatus Latr.--Madrid (Dusmet!). — micans Ny\.—Pozuelo de Calatrava (La Fuente! ). Myrmecocistus albicans Rog. —Ideim id. — altisquamis André.—Madrid (Dusmet!).—Un solo ejem- plar. 110 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Esta especie creo que no ha sido citada de Espana. M. An- dré, en su Species des Hymeénopteres, le senala como patria el Antilibano y Argelia. Formica rufibarbis Fabr.— Pozuelo de Calatrava (La Fuente!): Madrid (Dusmet! ). Lasius flavus Fabr.—Ambel (Dusmet!). — niger \..—Pozuelo de Calatrava (La Fuente!): Ambel (Dusmet!). — alienus Foerst.—Ambel (Dusmet)!). Plagiolepis pygmed Latr.—Pozuelo de Calatrava (La Fuente!): Chinchén (Dusmet!). Tapinoma erraticum Latr.—ldem id. Ponera contracta Latr.—Idem id. Tetramorium cespitum Latr.—Idem 1d. — cespitum Latr. var. semileve André.—Idem id. Leptothoraz tuberum Fabry. var. corticalis Schenck.—Idem id. — tuberum Fabry. var. afinis Mayr.—Idem id. — Rottenbergi kmery—Idem id.—Un solo ejemplar. Esta especie se ha citado como de Italia meridional, Sicilia, Palestina y Norte de Africa, en la obra de M. André, Species des Hymeénopteres. No tengo noticia de que, hasta ahora, haya sido cogida en Espana. Myrmica rugulosa Ny\.—Pozuelo de Calatrava (La Fuente!). — levinodis Ny\.—Idem id. Aphenogaster pallida Ny\.—\dem id. — festaceo-pilosa Lac.—Chinchon (Dusmet!). — barbara \..-—Pozuelo de Calatrava (La Fuente !); Madrid. Rivas (Dusmet! ). — structor Latr.—Pozuelo de Calatrava (La Fuente! ); Am- bel (Dusmet!). — subtervanea Latr.—Idem id. Pheidole pallidula Ny\.—Idem; Madrid (Dusmet!). Cremastogaster scutellaris Ol.—Idem; Chinchon (Dusmet!). — Schmidti Mayr. var. Auberti km.—Idem. Mutilidos. Mutilla barbara UL. var. decoratifrons Costa.— Pozuelo de Cala- trava (La Fuente!). — (Stenomutilla) argentata Vill. var. bifasciata K\.—Idem. — (Myrmilla) Chiesii Spin.—iIdem id.» DE HISTORIA NATURAL. 111 —E]l Sr. Rodriguez Mourelo leyo lo siguiente: «Sobre la obtencion del sulfuro de estroncio fosforescente por medio del carbonato de estroncio y el vapor de azufre. Hace ya bastantes anos aplicd M. Sidot 4 la reproduccién artificial de la wentzita un procedimiento sencillo, consistente en someter a las acciones del vapor de azufre el dxido de zine calentado a la temperatura del rojo cereza: el sulfuro de zinc resultaba muy bien cristalizado en este caso y formando sélo una masa cristalina sila temperatura no era bastante elevada. (Comptes-rendus, t. LX, p. 999: 1866.) (Jueriendo extender el método, aplicandolo a los sulfuros fos- forescentes de bario, calcio y estroncio, he practicado una serie de experimentos, cuyos resultados, tocante a este Ultimo sul- furo, se consignan en la presente nota. Kl aparato empleado consiste en un largo tubo de porcelana barnizada colocado sobre un hornillo horizontal de combus- tidn; en su interior colécanse dos navecillas de porcelana bas- tante separadas. Una de ellas contiene azufre en pequenisi- mos fragmentos, y la otra carbonato de estroncio natural (es- troncianita) de color agrisado y en polvo grosero. Uno de los extremos del tubo se cierra con un tapon provisto de un tubo de vidrio largo; el otro extremo, mas cercano de la navecilla que contiene azufre, comunica con un aparato productor de nitrogeno, cuyo gas, puro y muy seco, ha de llenar todo el aparato antes de empezar a calentar el tubo de porcelana; la corriente de nitrogeno ha de ser muy lenta. Se comienza calentando la parte del tubo de porcelana don- de esta la navecilla que contiene el carbonato de estroncio, y cuando la temperatura llega al rojo vivo, se calienta todo el tubo por igual. Operando en tales condiciones, el vapor de azufre es lentamente concentrado por la corriente de nitrogeno y reacciona muy bien sobre el carbonato de es- troncio. Los resultados obtenidos varian mucho, segun la naturaleza de los productos empleados, la temperatura a la cual se lleva a cabo la reaccién y el tiempo que ésta dure. Nunca, en los numerosos experimentos practicados, result6 cristalizado el sulfuro de estroncio; su estructura era granuda, sin indicios siquiera de forma cristalina, y 4 veces, cuando el carbonato 4 112 ACTAS DE LA SOCIEDAD KSPANOLA estaba en fragmentos del tamano de un guisante, el producto, de color agrisado claro, tenia aspecto escoriforme. Cuando se emplea un carbonato de estroncio puro, exento de dlealis y de caliza, el sulfuro de estroncio obtenido es blan- co y no fosforece. Se consiguen los mejores resultados em- pleando la estroncianita natural, cuyo polvo es de color gris obscuro; la stromnita, la emmonsita, la calstrom-barita y las calizas con 20 por 100 de carbonato de estroncio, pueden em- plearse tambien, aun cuando el sulfuro entonces preparado no resulte dotado de tan intenso poder fosforescente como siendo primera materia el carbonato de estroncio natural: la estroncianita empleada en estos experimentos tenia proxima- mente la composicidn siguiente: Carbonato de estroncio......... TAD ee Carbonato de calcio............. heer ey agetcte 2,03 Oxidos de hierro y de manganeso.......... trazas TVA EEE Ald. 6 Glo Geol cia tactn DA Olck cies ace ooh CAs 0,18 Me permito llamar la atenciOn acerca de la presencia del éxido de manganeso, siquiera sea en cantidad no determina- ble, por ser una de las substancias mas activas respecto de la fosforescencia: su estudio. en semejante respecto, pronto sera conocido. Para cada 5 er. de estroncianita empleaba a lo menos otro tanto azufre, y resultaba un sulfuro de estroncio con algo de sulfato y sulfuro de calcio, dando ademas las reacciones del hierro y del manganeso. La temperatura a la cual efectuase la reaccion tiene cierta influencia en el poder fosforescente del producto: su mayor capacidad para almacenar luz se con- sigue operando 4 la temperatura del rojo vivo; al blanco se consigue un sulfuro no fosforescente, y si la temperatura solo alcanzase al rojo cereza u obscuro, el sulfuro tampoco fosfo- rece, mas puede adquirir tal propiedad calentandolo en un erisol, al rojo vivo, durante dos horas. Entonces cambia de estructura y se aglomera tomando aspecto escoriforme. En la serie de experimentos realizados con objeto de estudiar la in- fluencia del calor se demuestra que la propiedad fosforescente adquiérela el sulfuro de estroncio solo cuando el vapor de azu- fre actia 4 determinada temperatura sobre la estroncianita; si este punto, que me atreveré a Hamar critico, se pasa, ni el sulfuro resultante es fosforescente. ni calentandolo de nuevo, DE HISTORIA NATURAL, 113 luego de formado, adquiere la propiedad aqui estudiada; y si, por el contrario, no se llega a la temperatura precisa, el sul- furo tampoco fosforece, pero adquiere la facultad de almace- nar luz calentandolo de nuevo como queda dicho. Respecto del tiempo que debe durar la accién del vapor de azufre, se hicieron algunas observaciones: la reaccién esta en cierto modo regulada por la corriente de nitrégeno. Conviene que ésta sea lenta, de tal manera que puedan contarse las burbujas; si es muy rapida gran parte del azufre es arrastrado Sin reaccionar y se condensa en el tubo de vidrio puesto al fin del aparato. Al principio, cuando solo se calienta el carbonato de estroncio, el acido carbonico desprendido deja la masa en un estado particular, muy apropiado para que en ella penetre el vapor de azufre, que ha de estar en exceso, y de este modo la reacciOn es posible; pero no se lleva 4 término ni es com- pleta sino al cabo de cierto tiempo. Tratase de una accidn len- ta; pues es menester vencer la resistencia del oxido de estron- cio para transformarse en sulfuro; de tal suerte que, a partir desde el momento en que la accidn del calor se extiende a todo el tubo de porcelana, han de transcurrir dos horas, sosteniendo la temperatura al rojo vivo para dar por terminada la opera- cién; si la accién del fuego se detuviere antes de este tiempo, el sulfuro de estroncio no resulta fosforescente, y para hacerle adquirir esta propiedad es menester calentarlo en un crisol, fuera del contacto del aire, 4 la temperatura del rojo vivo du- rante una hora. Cuando las cosas se disponen conforme queda dicho, una vez terminada la operacion, la navecilla que contenia el azu- fre debe estar vacia y sin residuo aleuno; y si durante el en- friamiento del tubo ha seguido pasando nitrogeno en la otra navecilla, se recoge un sulfuro de estroncio que, si en el mo- mento de extraerlo no es fosforescente, en él se desenvuelye esta propiedad con soélo dejarlo expuesto al aire durante media hora. Entonces basta exponerlo a la luz difusa veinte segun- dos alo sumo para que en la obscuridad emita intensa luz del color verde amarillento, propio de cuantos sulfuros de estron- cio he preparado en mis experimentos: la luminescencia ast provocada dura a lo menos doce horas, y el tiempo no parece amortiguar la condicion de almacenar luz en el sulfuro de esta manera preparado.» ACTAS DE LA SOC ESP. DE I. N.~ ABRIL, 1899, e iW ACTAS DE LA SOCLIEDAD LSPANOLA SECCION DE SEVILLA. Sesi6n del 6 de Febrero de 1899. PRESIDENCIA DE DON JULIO FERRAND, —Se leyo y aprobo el acta de la sesién anterior. —ll Sr. Chaves leyo la siguiente nota: «Sobre un ejemplar de oropimente. Kl ejemplar 4 que me refiero pertenece a la coleccién de minerales que dedica a la ensenanza la Academia Politécnica sevillana, 4 cuyos directores fué donado por D. Trinidad Ben- jumeda, hoy alumno de la Academia de Ingenieros militares. Llamé desde luego mi atencidn por el notable tamano del cristal que lo constituye, tamano que no alcanzan los diversos ejemplares de oropimente que he tenido ocasidn de examinar. El cristal referido mide en su mayor longitud 3 cm. Ks opa- co, como el oropimente en masa. Su color amarillo de oro, con brillo metalico y graso. Esta exfoliado en una de sus Caras. Estas se presentan muy rugosas, irregulares y desgastadas, lo cual no es extrano, pues el ejemplar estuvo mucho tiempo reunido en un cajOn con otros de minerales diversos antes de pertenecer 4 sus poseedores actuales. No obstante estos des- perfectos, se percibe desde luego la facies rombica, que parece estar constituida por las formas (100) (110)?, sin que puedan apreciarse otras & causa de sus irregularidades que impiden el estudio g@oniométrico. A mi juicio parece tratarse de una pseudomorfosis, quiza sobre baritina. La densidad, determinada por el método de la balanza hidrostatica, es 3,5723 a la temperatura de 14° C. El examen de una lamina delgada no ha ofrecido nada de particular; las inclusiones son escasas, pequenas y mal carac- terizadas. Es lamentable que dicho ejemplar no se halle en las condi- ciones necesarias para su estudio goniométrico, el cual per- mitiria fijar si se trata en realidad de una pseudomorfosis, y sensible es, sobre todo, el desconocer su localidad, la cual dudo sea espanola» (1). (1) Como citas de localidades espanolas del oropitmente sdlo conozco las del senor Fernandez Navarro, que da noticia de un ejemplar en masa y otros de rejalgar mn- DE HISTORIA NATURAL Sesién del 15 de Marzo de 1899 YRESIDENCIA DE DON MANUEL DE PAUL. —Se leyé y aprobo el acta de la sesidn anterior. —El] Sr. Medina ley6 la nota siguiente: «Datos para el conocimiento de la fauna himenoplerologica de Espana. (Continuacion.) Esfégidos. Cerceris enarginvata Panzer. ©.—Huevar vit (Patil! ). — /unata Costa. Q9.—Sevilla vir! Tarpactes levis Lep.—Ildeimn. Véspidos. Odynerus levipes Shuck.—Alcala de Guadaira vit! — elegans Wesm,. 9.—Cadiz u (Sanchez Navarro ! | } . Masaridos. Jnuguirtia Oraniensis Lep. O.—Hueévar vir (Padl!), Escolidos. Tiphia femorata ¥.—Sevilla vit! Crisididos. Chrysis incisa Ab. Buyss.— Madrid (Barras! ). Apidos. Rhombus hortorum L.—Cazalla vir (del Rio!). — terrestris L. QO ¢.—Cazalla iv (del Rio! ); Constan- tina vil! Sevilla!; Llerena vn (Calderdén!); Puerto- Real (Paul!).» eliados de oropimente, procedentes de Asturias, probablemente del concejo de Lena (xistentes en las colecciones del Museo de Historia natural, de Madrid. (ANALES pi LA SOC. ESP. DE HIST. NAT., tomo xxi, Actas, pig. 41, y tomo xxvii, Actas, pig. 133) Yambién se ha encontrado accidentalmente en escamitas sobre los cristales tabulares de baritina cubiertos de una costra de hierro de El Jaroso (Sierra Almagrera). (Cal- ceron: Rev's. de las baritinas. espan., ANALES DR LA Soc. ESP DF HIST. NAT,. te- mo xvi, Actas, pag. 128.) 116 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA —Se did lectura a la siguiente nota remitida por el Sr. Barras: « Datos para la florula sevillana. Fam. Enoteraceas. Epilolium parciflorum Schrd.—E1 Pedroso de la Sierra. — hirsutum L..—E1\ Pedroso de la Sierra. Fuchsia coccinea Ait.—Sevilla. (Cult.) Fam. Cactaceas. Opuntia vulgaris Mill.—Sevilla. Fam. Oleaceas. Olea europea L. var. Oleaster DC.—Sevilla. — — var. sativa DC.—Sevilla. (Cult.) Ligustrum Japonicum Thunb.—sevilla. (Cult.) Phyllirea latifolia L.—Cazalla. — angustifolia L.—Moron (Cala!). Fam. Jasminaceas. Jasminum officinale L.—Sevilla; Castilleja de la Cuesta. — grandiforum L.—Sevilla. — /fruticans L..—Alcala de Guadaira; San Juan de Aznal- farache; Bormujo. Fam. Apocinaceas. Nervium Oleander L.—Sevilla; Alcala de Guadaira; El Pedroso de la Sierra. Vinca media Hottm. et Lk.—Sevilla; Alcala de Guadaira; San Juan de Aznalfarache; Dehesa de Gascon, Marchena. Fam. Asclepiadeas. Cynanchum acutum L. var. Monspeliaca Desne.—Sevilla, en la Cartuja. Periploca Greca L.—Sevilla. (Cult.) Fam. Convolvulaceas. Convolvulus arvensis L.—Sevilla: Alcala de Guadaira. — “aitheoides L.—Sevilla; Aleala de Guadaira; Tomares; Dehesa de Gascon, Marchena. — fyricolor L.—Sevilla; Huévar; Dos Hermanas. DE HISTORIA NATURAL. =i Kam. Cuscutaceas. Cuscuta europea L.—Sevilla. — LKpithymum Murr. var. vulgaris EFng.—Dos Hermanas Fam. Borraginaceas. Cerinthe major L.— Lomo del Gullo, Sevilla; Aleala de Gua- daira. Cynoglosum pictum Ait.—Sevilla; Dos Hermanas (Pau!); Alcala de Guadaira; San Juan de Aznalfarache; Tomares; Huévar (Paul!). — cheirifolium L.—Cerro de Quintos. Omphalodes linifolia Moench.—Sevilla; Dehesa de Arnau Ce- bolla; Aleala de Guadaira. Asperugo procumbens L.—Sevilla; Aleala de Guadaira; Vega de Triana (Pau!). Heliotropium Perurianum L.—Sevilla. (Cult.) — europeum L.—Sevilla: Cortijo de Cuartos; Dos Herma- nas; Alcala de Guadaira; Vega de Triana. — supinum L.—Sevilla; Cortijo de Cuartos; Dos Hermanas; Palma del Rio. Anchusa Italica Retz.—Sevilla. Comun en toda la provincia. — undulata L.—Dehesa de Gascon, Marchena; Almonte. horrago oficinalis L.—Sevilla; Alcala de Guadaira; San Juan de Aznalfarache. (Frecuentisima. ) Myosotis intermedia Lk.—Sevilla. Echinm vulgare L.—Sevilla; San Juan de Aznalfarache; Alcala de Guadaira; Moron (Cala!); Constantina (Medina!) — Marianum B.—Constantina. — pustulatum Sibth.—Alcala de Guadaira; Dehesa de Gas- con, Marchena. — plantagineum L.—Sevilla; Dehesa de Gascon, Marchena; Vega de Triana (Pau!); Almonte. — Creticum V..—Sevilla. — TLtalicum L..—Tomares. — Gaditanum Boiss.—Dehesa de Gascon, Marchena; Al- monte. — Lagasce R. Sch. (paniculatum Lag.)—Dehesa de Gascon, Marchena. Symphytum tuberosum .—Sevilla. 118 ACTAS DE LA SOCIEDAD KSPANOLA SECCION DE ZARAGOZA. Sesién del 22 de Febrero de 1899. PRESIDENCIA DE DON JOSE A. DOSSET. —se leyo y aprobo el acta de la sesién anterior. —LI] Sr. Dosset did cuenta del fallecimiento del Presidente: (le esta Seecidn, el Dr. D. Bruno Solano, haciendo un sentido elog~io de tan esclarecido catedratico. —Se tomaron algunos acuerdos encaminados 4 honrar |: memoria del ilustre finado, y se levanté la sesién en senal de duelo. Sesi6n del 22 de Marzo de 1899. PRESIDENCIA DE D. FELIX GILA. -Fue leida y aprobada el acta de la sesién anterior. —Se hicieron dos propuestas de socios agregados y una de socio de numero. —KI Sr. Jimeno did lectura de una biografia-elogio finebre del Presidente D. Bruno Solano, recientemente fallecido (1). — El Sr. Moyano (D. Pedro) leyé las siguientes: «Nolas etnologicas sobre el ganado espanol. I. Bases generales para formar una clasificacién de razas. Importancia del conocimiento étnico de las vazas.—Es de gran necesidad en Espana el estudio de una agrupacidén cientifica ‘le los ganados oriundos de su medio césmico que sirva, no ya solo para describir ordenadamente las diferentes razas que en ella se producen, por ser su conocimiento indispensable en la guia de las operaciones zootécnicas de seleccién y cruza- iniento, sino también para darlas 4 conocer con nombres pro— pios, tanto a los del pais como a los extranjeros, en lo cual debemos tener verdadero empeno. Esta medida evitara la vaguedad de las denominaciones que hoy se emplean en la mayoria de los casos al hablar de ganados, usando, por ejem— plo, el término ambiguo de raza del pais, aplicado lo mismo a (1) Serdé publicada en las Vemorias por acuerdo de la Comision de publicacién. DE HISTORIA NATURAL. ge individuos de pura sangre 6 raza que a los mestizos y varie- dades. Obsérvase que hasta 4 individuos de razas distintas en una misma localidad se les da también aquella denominacion verdaderamente impropia. Desde que por nuestros especiales estudios pudimos apre- ciarlo, tomamos con afan la descripcidn de los ganados del pais, y en la actualidad contamos con numerosos datos reco— gidos en nuestras excursiones zootécnicas y mediante la pro- vechosa. consulta de cuantas publicaciones de esta materia existen en Espana, con los cuales puede intentarse un ensayo de agrupacién étnica que comience a ordenar y dé nombre propio a las razas 6 colectividades diferentes de ganado que en nuestra nacion se conocen. Bien comprendemos que esto solo no es suficiente; pues para hacer completa una agrupacion étnica es indispensable reali- zar mayor numero de excursiones por todos los centros gana— deros, analizando minuciosamente el valor de todos y de cada uno de los caracteres que ofrecen los individuos hasta formar la caracteristica de la raza 6 subraza propia de cada localidad: pero esta obra, como se comprende, por lo costosa, sdlo puede acometerse contando con el apoyo oficial. No obstante lo expuesto, comprendiendo ser de imperiosa necesidad se forme alguna agrupacidn cientifica de dichas razas y subrazas espanolas, y ante las reiteradas excitaciones de sabios naturalistas espanoles para que demos a conocer nuestros trabajos especiales realizados al objeto, nos decidi- mos 4 presentar a la consideracién de esta docta Sociedad el presente ensayo preliminar. Mas antes de hacerlo estimamos conveniente consignar aleunas generalidades previas para poner de manifiesto el eriterio que hemos adoptado en la diagnosis étnica de las razas y el concepto de aleunos de los nombres que empleamos. Datos historicos.—WLa falta de libros genealdgicos de los dife- rentes ganados de Espana imposibilita el aporter aqui los antecedentes histdricos de las razas, pero aletin dia debe empezarse y la ocasidn es Ilegada. Podemos asegurar, sin temor de ser rectificados, que nues- tros ganados se producen en la actualidad, por regla general. como en tiempos muy remotos, y de aqui que las colectivida- «es, que facilmente se distinguen, pueden considerarse como 120 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA debidas al medio en que se han originado y perpetuado des— pués por transmisiOn hereditaria. 137] Conceplo de raca.— Las opiniones que existen acerca de esta cuestidn cientifica son muchas y muy diferentes. Nosotros, sin entrar en su analisis, solo sefalaremos la que uos parece mas aceptable, bajo el punto de vista étnico. ntendemos, pues, por raza, e/ conjuato de individuos de una misma especie, de igual grado en su desarrollo y particularidades organicas de adaptacion transmisibles a su descendencia. Subraca.— Ks una modalidad de la raza. La forma e/ conjunto de individuos que, ademas de los caracteres dela raza, ofrecen al- gun otro especial fijo, que los distingue dela anterior colectividad. Ambos términos, son los més usuales entre naturalistas, zootecnicos y ganaderos. Variedad.—Coleccion de individuos que reconocen el mismo ori- gen filogénico, pero que se distinguen de sus congéneres por ofrecer algun caracter comin no transmisible a sus descendientes.—Care - cen de fijeza los caracteres que distinguen la colectividad. Mestizos.—Llevan este nombre /os productos vesultantes del cruzamiento de dos razas. Importa conocer Ja significacién de estos nombres para su buen uso. Caracteres étnicos.—Son todos aquellos que sirven como dis- tintivos de las razas, deducidos de la conformacién general de los individuos y de Jas particularidades que ofrecen en la piel y sus dependencias, en la cabeza, tronco y extremidades. Agriipanse en tres secciones: en morfoldgicos, fisioldgicos y patologicos, en orden 4 su significacion. Diagnosis etnica de las razas.—Resulta de la observacién y comparacion de los diferentes individuos. Algunos autores han fijado su atencion en los caracteres que ofrece la cabeza; pero creemos preferible hacerlo sobre la tota- lidad del organismo, porque en todo él puede presentarse al- guna particularidad que sirva al objeto. También conviene procurar la averiguacién de indices zoo- tecnicos, por ser recursos utilisimos en la diagnosis étnica. iin nuestros trabajos, hemos seguido el procedimiento del sabio zootécnico M. Cornevin, y cuyos fundamentos son los que a continuacion se expresan: Indice cefilico total: se obtiene hallando la relacion que exis- DE HISTORIA NATURAS.. 12t te entre la anchura maxima de la cabeza (6 sea el intervalo albi-intermalar en los équidos, 6 el bicigomatico en los bévi- dos, évidos y suidos), y la longitud, también maxima de la cabeza, desde el centro de la nuca al borde anterior de los hue- sos incisivos, elevada esta dimensidn a 100. : 100 ~< Diimetro trasversal Diametro longitudinal Indice facial.—Se deduce de la relacién hallada entre la lon- gitud y la anchura de la cara, siendo aquella elevada a 100. La dimension longitudinal comprende el espacio que existé desde el centro de los limites del craneo y cara al vértice de los huesos incisivos, 6 borde calloso en los rumiantes: la trans: versal, la anchura maxima de la cara. és 100 > D. tr. $ cae Su formula es: —————. = _ Indice facial. Su formula es: = Indice cefalico total: Indice nasal.—Se deriva de la relacién entre la longitud y anchura de la regién anatomica a que sirven de base los propios de la nariz, elevada también aquella a 100. =. Way 100 >< D. tr. Su formula es: —- ie Indice nasal. Con el mismo objeto que los indices, puede utilizarse la me- dicién del perimetro toracico, 6 sea, haciendo pasar una cinta coometrica de un lado a otro del costado, desde el centro de la cruz, pasando por el centro de la region post-axilar, 6 cinchera. La lougitud del tronco, 6 sea de la punta de la espalda a la del isquion, se toma desde el centro del encuentro al de la nalea. | Tales son las diferentes medidas que pueden tomarse en los individuos como medios auxiliares de la diagnosis étnica. Condiciones del medio donde se producen las razas.—Son todos los agentes cOosmicos que influyen sobre los individuos, tales como la naturaleza del terreno, su configuracion, clima, régi- men alimenticio, intervencién del hombre por la gimnasia funcional, etc. También contribuyen causas organicas, hasta la fecha no bien explicadas. Area topografica.—Comprende el sitio 6 comarca donde se halla extendida la raza, y en el cual encuentra las mejores condiciones de subsistencia. Hé aqui ahora la agrupacidn étnica de razas y subrazas, cuyo estudio monografico nos va @ ocupar en notas subsi- cuientes: 122 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Ensayo de agrupacion ¢tnica de razas y subrazas del ganado espaiol, ESPECIES. RAZAS, SUBRAZAS. ( Marismena. Vitoriana ~ Andaluza 6 bética....... ; = ' Rondefna. Equus caballus........ Ampurdanesa.... ...... Aragonesa. Vasco-navarra. Mallorquina,. : L \ Ampurdanesa. Espafigla... occsasbew atv / Castellana, | Equus asinus....... a9 Mndalions | Comunale Bue: ....| Cordobesa. | | Andaluza. Castellana. | | Gallega. | : Astiirica. Bos taurus............ Rbbricas 42. Seva. Gys : Pasiega. Vasca, Navarra. Ampurdanesa. | | ° | . . Merina:*s20-,27tys. oe ee | Curie). \ Ibérica, OUT OFROB oid eon acie Manchega. | Aragonesa. Churra. | | Aestercalionlth | Granadina. | | Extremefia. Ovi E \ Avilesa. UL CUB OL csieincc dso a ) Hana Ola eo: Sn. cotcccpare aes t P Aragones*. Leonesa. | | Murciane. i Al J Extremena. | 4 = \ éltica. Sue serophe.. isis. .%.'. | / Balear. | DE HISTORIA NATURAL. 123 —-KI R. P. Navas dié lectura a la siguiente nota: «Liquenes de Chamartin de la Rosa (Madrid). Siguiendo la acertada idea del Sr. Lazaro de dar a conocer en catalogos parciales los liquenes de Espana con el fin de prestar materiales 4 trabajos cientificos ulteriores, presento la lista de los recogidos por mi en la tarde del dia 13 de Febrero del presente ano, hallandome en el Colegio de Nuestra Senora del Recuerdo, sito en Chamartin de la Rosa. Todos ellos se en- cuentran en el bosquecillo y jardin del referido Colegio. Exi-— vuo es el nimero que presento, pero también es reducido el sitio explorado, y, sin embargo, acaso no se habia sospechado pudiera ser abundante en liquenes. Lo cierto es que la mayor parte de los que voy a mencionar no se habian citado atin de Madrid 6 sus alrededores, y aun varios de ellos tampoco de Espana. Fuera de ésto, no pocas veces son mas Utiles los tra- bajos que mas se circunscriben a pequeno espacio; y en el es— tado actual de los estudios liquenolégicos en Espana, de desear seria que se investigasen cuidadosamente localidades reduci-— das, en la seguridad de hallar novedades y sorpresas de no poco interés para la ciencia. Sea de ello lo que fuere, sirva este ensayo como preambulo 6 estimulo para los doctos trabajos de aquellos que mas pue— dan y sepan. Hé aqui, pues, la lista de los liquenes recogidos: Cladoniaceos. Cladonia furcata Ach. var. racemosa Hotftm. f.* stricta Ach.— Abundante hasta el punto de formar alfombra en el bosque entre los pinos. Debo la exacta determinacion de esta forma, asi como de algunas otras de este cata- logo, al distinguido liquendlogo francés Sr. Boistel, a quien consulté en mis dudas. — — var. pinnata f.2 truncata F\k.—Con la anterior. — alcicornis Lehtf.—En el suelo. Tan abundante como las anteriores, hasta en los sitios mas despejados. — pyxidata L.—Frecuente. — — f. phyllocephala Scher.— Pocos ejemplares. 124 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Cetrariaceos. Lelraria aculeata Schreb. var. campestris Scher.— Formando césped en el bosquecillo de pinos. Platysma sepincola Ehrh. var. chlorophyllum Willd.—En los pinos, etc., escaso. Ramalinaceos. Aeernia prunasti L. f° munda Scher.—Muy abundante en los troncos de los pinos, especialmente al pie. — — f. soredifera Ach.—Abundante en otros arboles de fuera del bosque. Ramalina calicaris L. var. fraxined \,.—Kjemplares jovenes. — — — f. luxurians Del. — pollinaria Ach. var. humilis Ach. Parmeliaceos. Purmelia scortea Ach.—Frecuente en troncos de pinos y de otros arboles. — Viliacea Ach.— Algunos autores consideran la anterior como variedad de ésta. — saxatilis L.—En troncos, joven. — conspersa Ach. var. stenophylla Ach.—Sobre piedras, 6 bien suelta, formando pelotones y envolviendo pie- drecillas y ramitas del suelo. olivacea L. var. munda Scheer.—En troncos. — exasperata Ny\.—¥n cortezas y ramas lisas. Fisciaceos. Physcia pulverulenta Schreb.— Comun la forma tipo y las si- guientes: — var. pilyrea Ach. DE HISTORIA NATURAL. re Physcia puloerulenta var. venusta Ach. f.2 subvenusta Ny. — — var. argyphea Ach. — stellaris L. var. cercidia Ach. — — var. dipolia Ach.—Comun, — — var. leptalea Ach.— Mas escasa. — — var. tenella Scop.—Comunisima, recubriendo espe- cialmente troncos jovenes y ramillas hasta del ZAy- mus vulgaris L. — obscura Ehrh. var. cycloselis Ach.—En cortezas viejas. — dadglutinata Fik.—Con la anterior, mas frecnente. Aanthoria parietinag L.—En los arboles de los paseos, etc. — candelaria L.—KEn las cortezas de pinos. Lecanoraceos. Pannaria muscorum Ach. Squamaria lentigera WNeb.—Abundante en la lomilla del bos- que, en sitios despejados. — saxicola Poll.—Sobre el granito, en las pilastritas del jardin y en los ladrillos de un puentecito. Caloplaca citrinag Ach. var. phlogina Ach.-- in cortezas y pie- dras pequenas, — pyracea Ach. var. saxicola Arn.— En una piedra silicea. Lecanora varia Klrh.—En cortezas de pinos vy en el corte de sus ramas. — atra Huds. var. vu/garis Scher.—Sobre granito. — albella Pers. var. angulosa Ach.—En los pinos. — piniperda Krb. — Hageni Ach.—‘"n cortezas de pinos y otros arboles. — — var. wmbrina Ehrh. — sambuci Nyl. — rugosa Pers.—iin Gledilschia triacanthos L. — subfusca L. var. vulgaris Scher.— En diversos troncos — — var. distans Scher. — — var. argentata Ach.—En cortezas lisas. — chlarona Ach.—En los pinos. Lecania syrvingea Th. Fr.—iin Gleditsehia. Rinodina exigua Ach.—Kn varias cortezas, especialmente lisas. Aspicilia cinerea \..—Bien desarrollada en el granito. 126 ACTAS DE LA SOCIEDAD KSPANOLA Aspicilia gibbosa Ach.—Sobre silice. Viceolaria scruposa L..—Mal desarrollada. Lecideaceos. Psora decipiens Whrh.—Abundante en el bosque, en sitios libres de arboles. — JluridaSw.—Con la anterior. Lecidea eleochroma Ach.—Comunisima eu casi todos los tron- cos y ramas Viejas. Hallanse las siguientes: _ — — var. achrista Th. Fr. — — var. ¢uphorea Sfit.—La mas abundante. — -— var. exigua El. Fr. Grafidaceos. Arthonia galactites Duf.—En el tronco de Populus alba I. — punctiformis Ach.—\n la Gleditschia triacanthos (i. Endocarpaceos. Hudocarpon exiguum Ny\.—kn ei suelo. Verrucaria muralis Ach.—Kn piedras siliceas, Caliciaceos. Calicium disseminatum Ach.— Un las cortezas de pino. Colemaceos. Collema cheileum Ach.—Jin lo alto de la loma. Leplogium palmatum Bernh.—Entre el musgo. Poudre fin a esta nota con una observacion, La abundancia de liquenes en un sitio determinado es indicio de salubridad y pureza (lel aire. Asi lo dice el principe de los ligquendlogos DE HISTORIA NATURAL. 127 contemporaneos, W. Nylander. « Por cuanto los iquenes dan, a’ su manera, la medida de la salubridad del aire y constitu- yen un linaje de Azyidmetro muy sensible, he creido util indi- car las especies que he hallado en el paseo publico del jardin del Luxemburgo». (Nyland: Les lichens des environs de Paris, pag. 3). El mismo autor refiere el dicho del Dr. Stizenberger, quien, estimando en mucho esta facultad higiométrica de los liquenes, opina que conviene tomarlos como guia cuando se busca una habitacion en las ciudades, puesto que el aire es generalmente bueno y sano donde ellos vegetan en gran nu- mero (/bid., pag. 4, nota). Que abunden los liquenes en Cha- martin lo prueba, ademas de lo que llevo dicho, el haber po- dido reunir mas de 60 formas liquénicas en el breve espacio de tres horas. Sirva de aviso a los madrilenos que salen a es- paciarse y respirar aire puro por las alturas de Chamartin de la Rosa.» —El Sr. Aguilar, de Calatayud, did lectura 4 los siguientes «Apuntes para el estudio del mioceno bilbilitano. I. Coprolitos. La faja en que esta situada la ciudad de Calatayud es, por varias causas, muy digna de estudio. Basta examinar la co- marca que la rodea, en la que se hallan representados gran numero de terrenos geoldgicos, para sospechar que son muy variados los materiales que intervienen en su formacion; y 4 poco que se inspeccionen las capas que la forman, se ve con- firmada esta sospecha. Las fallas producidas al formarse parte del valle del Jalon han dejado descubiertas las capas inferio— res de tal modo, que pueden examinarse con relativa facilidad todas las que constituyen este terreno; y por ultimo, los limi- tes del mismo y el desagiie de su antiguo lago son tan mani- fiestos, que pudiera esta localidad servir muy bien de modelo en nuestro pais para el estudio del terreno mioceno lacustre. No se han hecho hasta la fecha estudios detenidos que per- mitan formar una monografia completa, y por esta razon he de limitarime a dar 4 conocer los estudios parciales que vaya 128 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA llevando A cabo, con menos perfeccidn de lo que yo quisiera, presentando a la vez los materiales que recoja en mis excur- siones, y que podran servir a los gedlogos mucho mejor que las referencias que yo pueda proporcionarles. En la primera excursidn realizada con este objeto por el tér- mino municipal de Terrer, en la confluencia del mioceno con el diluvial, he encontrado, siguiendo la indicacién del senor Donayre, en su descripceidn de esta provincia, un notable depé- sito de coprolitos que se extiende desde la parte Sur de los borrales de /a Cafada, termino de Terrer, hasta unos 200 m. proximamente y entre los dos atajos que hay desde este pue- blo al de Laviluena. Hallanse los dichos coprolitos sobre capas horizontales de selenita, sueltos y en su posicién natural, a excepcidn de los removidos 4 la orilla del camino por el paso de los ganados. La forma y tamano de estos fdsiles son muy variados; tanto, que puede sospecharse que hayan contribuido varias especies A la formacién del depdésito. Ofrecen, ademas, consistencia distinta, siendo algunos muy porosos ; pero todos ellos parecen formados principalmente por yeso, sin cantidad apreciable de fosfatos. No van acompanados, al menos los que hay al descubierto, por ningun otro resto animal que permita hacer un estudio mas completo de dichos coprolitos. Las figuras que aqui se ponen, reducidas a la mitad del ta- mano, dan idea de las formas que presentan ». —Suspendida Ja sesién durante diez minutos, se procedid, después de reanudada ésta, 4 la eleccién de Presidente, resul- tando elegido por unanimidad de votos el. Sr. Viccpresidente, D. José A. Dosset, y para el cargo de Vicepresidcnte D. Patri- cio Borobio, también por unanimidad de votos. —-_ i ni ie DE HISTORIA NATURAL. 129 Sesion extraordinaria del 3 de Mayo de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. —Fué leida y aprobada el acta de la Ultima sesién extra- ordinaria. —Se acordé nombrar socios protectores a8. A. 8S. el Principe Alberto de Monaco y 48. A. el Archiduque Luis Salvador, pro- puestos por la Junta Directiva en testimonio de gratitud por los importantes donativos de sus muchas y valiosas publica- ciones conque se han dignado favorecer a nuestra Sociedad. Sesion ordinaria del 3 de Mayo de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. —Leida el acta de la sesién anterior fué aprobada. —(Quedaron admitidos como socios numerarios Oramas y Gonzalez (D. Pablo), de Santa Cruz de Tenerife, presentado por D. Salvador Calderon ; Ibanez Diaz (D. Francisco Antonio) y Jiménez Munuera (D. Francisco de Paula), ambos de Car- tagena, presentados por D. Ignacio Bolivar en la sesion ante- rior. —Se hicieron cuatro nuevas propuestas de socios numerarios. —Se did lectura 4 una proposicién suscrita en 10 de Abril ultimo por los Sres. D. Enrique Pérez Zufiga, D. Aurelio Vaz- quez y D. José Gémez Ocafia, y aprobada por la Junta Direc- tiva, para que fueran nombrados socios correspondientes ex- tranjeros los eminentes naturalistas Sres. Charles Brogniart, de Paris, y Alfred Preudhomme de Borre, residente en Petit- Saconnex (Ginebra), 4 quienes somos deudores de valiosas publicaciones. —El Sr. Presidente, con sentidas palabras, manifestd que aquella propuesta no podia realizarse desgraciadamente por ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.—Mayo, 1899. 9 130 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA lo que respecta al Sr. Brogniart, que habia fallecido el dia 18 de Abril Ultimo, segun esquela recibida por uno de nuestros consocios. Procedia, sin embargo, a su juicio, hacer constar en el acta el sentimiento de la Sociedad por la pérdida de una persona que habiamos considerado ya como consocio y que espontaneamente nos habia favorecido con el regalo de sus cuantiosas ¢ importantes publicaciones, pudiendo asegurarse que el deseo de corresponder de algtin modo a tan generoso despreudimiento era el que habia hecho nacer la idea de crear la categoria de socios correspondientes extranjeros; también propuso que se participase a la familia del finado los propdési- tos de la Sociedad 4 mas del sentido pésame por tan irrepara- ble pérdida. La Sociedad asi lo acordé, después de oir las fra- ses del Sr. Presidente y de algunos de los socios presentes en elogio del eminente naturalista Charles Brogniart. Por unanimidad quedo elegido socio correspondiente M. Al- fred Preudhomme de Borre. —Se leyeron las actas de la sesiones celebradas por las Sec- ciones de Sevilla y de Zaragoza, que se insertan al fin de ésta. —El Sr. Bolivar dijo, 4 propdsito de la noticia participada por el Sr. Soler en el] acta de la Seccién de Zaragoza que aca- baba de leerse, que la observacién a que se referia hubiera sido conveniente completarla coa la indicacién del color de las flores del mesembriantemo, pues sabido es que los himendépte- ros no solo aprecian los colores, sino que, a juzgar por las ex- periencias minuciosas y detalladas de Lubbock, tienen una preferencia marcadisima por el color azul, y si éste fuera el de las referidas flores pudiera no ser otra la explicacién de las frecuentes visitas de las abejas a las flores de la planta men- cionada. —El mismo sr. Bolivar presento la siguiente nota acerca de «Dos formas larvarias de lampiridos. Me ha sugerido la idea de dar 4 conocer a la Sociedad estas dos larvas de lampiridos el haber visto en el Bulletin de /a Société entomologique de France, correspondiente a la sesion del 22 de Febrero ultimo, que M. J. Bourgeois ha creido de interés describir y figurar otras andlogas, una de ellas por cierto muy semejante a la representada en la figura 2.", y que Ee DE HISTORIA NATURAL. 131 en concepto de este sabio entomédlogo correspondera @ un in- secto del género Zycus. El reducido niimero de especies cono- cidas en estado de larva, y que no pasa de cinco, segtin la enu- meracién de M. Bourgeois, la forma extrana de estos animales y la ignorancia en que estamos de sus costumbres, da verda- dero interés a todo lo que tienda 4 ilustrar 6 esclarecer este asunto. La larva representada en la expresada figura es en un todo semejante a la figurada por M. Bourgeois en la publica- cién citada; pero como observo algunas diferencias tanto en la forma de los segmentos toracicos como en las prolongacio- nes espiniformes de los del abdomen, y muy especialmente en la del segmento anal, especie de telson en que termina el cuerpo, diferencias que podran apreciarse comparando aque- lla figura con la que doy de esta larva, y que no me detengo a enumerar, he creido conveniente dibujarla para que los es- pecialistas puedan juzgar respecto al grado de importancia de esas diferencias y deducir si puede 6 no pertenecer este insecto ala misma especie 6 4 otra afine del mismo g@énero. Este ejem- plar, como el descrito por M. Bourgeois, procede también de Borneo y pertenece 4 nuestro consocio D. Napoleon Kheil, de Praga, formando parte de un lote de insectos que tuvo la bon- dad de enviarme para su estudio. La otra larva que represento de tamano natural (fig. 1.*) es mas interesante que la anterior, siquiera su forma sea menos extrana, porque se diferencia mas de las especies descritas; procede de Filipinas y fué recogida por D. Domingo Sanchez y Sanchez, colector zoolégico de la Inspeccién de Montes, a quien se deben tantos descubrimientos interesantes. No puedo menos de considerar esta larva como correspondiente a la mis- ma familia que la anterior; pero no puedo asegurar el género a que pertenezca, por lo que me limito 4 dar la figura de la misma. No terminaré sin llamar la atencién de aquellos de nuestros colegas que viven en paises donde habitan estas larvas para que procuren observarlas y nos den @ conocer sus costumbres, en las que algo de nuevo habian de encontrar, como lo anun- cia lo extrano de su forma. Haré observar también que ademas de las particularidades descritas por M. Bourgeois, encuentro digna de mencidn la forma de la abertura anal, 6 mas bien del 132 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA tubérculo 6 aparato especial en que se encuentra colocada, y que consiste en un reborde circular a manera de taza, de pare- des resistentes, y en cuyo centro se abre aquel; este tubérculo, que he representado al lado de la figura de la larva de Filipi- nas, en la que alcanza dimensiones extraordinarias, pudiera ser una ventosa? en: Migeee vig. 2.2 a b a vb La fig. 1.2 a representa la larva de Filipinas de tamano natural : se observard que los extremos del ultimo segmento abdominal estén representados por medio de una linea de puntos por hallarse rotos y faltar en el ejemplar que se dibuja. La 1.4 2 es el mismo segmento aumentado y visto por debajo para que se pueda apreciar la forma del tubérculo anal. La fig. 2.2 representa la larva de Borneo de tamato natural @ vista por encima y J por debajo. Después de comunicadas a la Sociedad las anteriores notas he tenido el gusto de recibir carta de M. Bourgeois, 4 quien envié una prueba de las figuras adjuntas tan luego como es- tuvo dispuesto el cliché, considerando el interés conque la recibiria. M. Bourgeois confirma en ella mis suposiciones, ase- gurando en estos términos que la larva de Borneo correspon- de 4 la misma especie descrita por él: «J’avais remarqué moi- méme, dans l’étude que j’ai faite des exemplaires qui m’ont été communiqués (environ 8 a 10) et qui appartenaient a des larves & différents degrés de développement, de légeres va- riations dans la long‘ueur et le plus ou moins de gracilité des prolongements latéraux de Pabdomen, ainsi que dans la for- me du dernier segment. Dans tous les cas si votre larve n’est pas identique 4 la mienne, elle se rapporte a une espeéce ext7é- mement voisine». Y aiade, por lo que respecta a la otra larva: DE HISTORIA NATURAL. 133 «Quant a celle des Philippines, elle est toute autre et je ne se- rais méme pas étonné quelle n’appartient pas au genre Lycus... D’aprés la forme du premier segment thoracique, elle se rap- procherait des larves de Calopteron, mais ce genre ne figure pas aux Philippines, du moins jusqu’a present. Il y a bien aux Célebes un genre tres voisin que M. Waterhouse a décrit sous le nom de Brorylus et qui représente les Calopteron dans VEXx- tréme Orient. Est ce & une espéce de ce genre qu'il faudrait rapporter votre larve?... D’un autre cote, je ne connais pas non plus de Zycus philippins. Les Lycides représentés dans ces iles appartiennent tous a des genres tels que Difoneces, Metriorrhynchus, Trichalus, ete., qui se rapprochent plus ou moins tous de nos Dictyopterus (Hos) européens. Quoiqwil en soit cette larve des Philippines est des plus intéressantes et il serait fort & souhaiter que nous puissions étre édifiés bientot sur ses métamorphoses et savoir a quelle espece nous devons la rapporter.» —-Se leyé la siguiente nota, remitida por los Sres. T. See- bold y G. Schramm: «Datos para el conocimiento de la fauna hemipterologica de Espana.— Bilbao y alrededores. I.—Heteroptera a/v. Sect. .—GEOCORISA air. Fam. L.—PENTATOMIDES. Supram. 2.—Scutelleride. Tr. 1.—Scutellerini. Odontoscelis fuliginosa Lin.—Serantes , Portugalete, Las Are- nas, La Cuadra. Mayo, Junio, Octubre. Eurygaster Maura Lin.—Portugalete, Las Arenas. Junio a Oc- tubre. — maroccana Fab. Tr. 2. —Graphosomini. Graphosoma semi-punctatum ¥.— Las Arenas, — Jineatum Lin.—C. en todas partes. Verano. Podops inuncta Fab.—Portugalete, Serantes, Gallarta. Marzo, Abril. 134 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Srv. 3.—Pentatomide. Tr. 1.— Cydnini. Cydnus flavicornis Fab. Geotomus punctulatus Costa.—Las Arenas, Portugalete. Marzo. Septiembre, Octubre. Brachypelta aterrima Foerst.—Las Arenas. Octubre. Tr. 2.—Pentatomini. Sciocoris macrocephalus Fieb.—Lemona, Abril. — terreus Schrk.—Las Arenas. Septiembre. Alia acuminata Lin.—Las Arenas, Galindo. Mayo a Julio. Eusarcoris eneus Scop.—Las Arenas. Septiembre. — melanocephalus ¥.—Lemona, Abril. — inconspicuus H. 8.—Las Arenas, Galindo, Portugalete, Santurce. Mayo a Agosto. Carpocoris nigricornis F.—Las Arenas, Sestao, La Cuadra, Se— rantes, etc. Mayo a Octubre. — baccarwm Lin.—C. en todas partes. Mayo a Octubre. Palomena viridissima Pod.— La Cuadra, Portugalete, Castre- jana. Junio a Octubre. — prasina L.—Castrejana, Bilbao, Serantes. Marzo a Junio. — — var. subrubescens Gorsk.—Las Arenas. Septiembre, Octubre. Nezara viridula L.— La Cuadra. Junio. Piezodorus incarnatus Germ. — — var. alliaceus Germ.—Serantes. Marzo a Mayo. Rhaphigaster grisea Fab.—Portugalete, Las Arenas, Santurce. Abril 4 Agosto. EBurydema ornatum L.—Santurce, Las Arenas. Mayo a Julio. — cognatum Gieb.—Las Arenas, Algorta. Agosto 4 Octubre. Tr. 3.— Asopini. Podisus luridus Fab. Zicrona cerulea Lin.—Las Arenas. Mayo, Junio. Tr. 4.—Acanthosomini. Acanthosoma hemorhoidale Lin.—Lemona. Abril. DE HISTORIA NATURAL. 135 F. Il.—CORBIDES. Tr. 2.—Coreini. Div. 1.—Gonoceraria. Enoplops scapha F.—Las Arenas, Portugralete, Lamiaco. Marzo a Mayo. Syromastes marginatus Lin.—C. en todas partes. Verano. Verlusia rhombea Lin. — Portugalete, Las Arenas. Junio 4 Agesto. var. sinmuata Fieb.—Las Arenas. Div. 2.— PseuDOPHL@ ARIA. Ceraleptus gracilicornis H. S.—Las Arenas. Coreus scabricoriis Scop.—Lemona. Mayo. — hirticornis F.—Las Arenas. denticulatus Scop.—C. en todas partes. Verano. Tr. 3.—Alydini. Micrelytra fossularum Rossi.—Gallarta, Valmaseda. Mayo a Septiembre. Alydus calcaratus Lin.—Las Arenas, El Regato. Octubre. Tr. 4.—Stenocephalini. Stenocephalus agilis Scop. — Algorta, Santurce, Portugalete Valmaseda. Mayo a Agosto. — neglectus H. 8.—Algorta, La Cuadra, El] Regato, Castre jana. Mayo a Octubre. Tr. 5.—Corizini. Therapha Hyoscyami Lin.— Las Arenas, Luchana. Mayo a Oc- tubre. Corizus crassicornis Lin.—Mayo a Octubre. — — var. abutilon Rossi. — hyalinus Fab.—Santurce, Las Arenas, Valmaseda. Mayo, Octubre. — capitatus Fab.—Santurce, Las Arenas , Valmaseda,. Ve- rano. 186 ACTAS DE LA SUCIEDAD ESPANOLA Fr. [V.—LYGASIDES. Tr. 1.— Lygeini. Lygeus familiaris F.—C. en todas partes. Abril a Agosto. — equestris L.—Santurce, Portugalete, Serantes, San Ju- lian de Musques. Abril 4 Agosto. — wmilitaris ¥.—Portugalete. Agosto. — apuanus Rossi.—Las Arenas. Junio. — punctato-gultatus ¥.—Las Arenas. Junio. Tr. 2,— Cymini. Cymus melanocephalus Fieb. — obliquus Hovarth.—Las Arenas. Ischnorhynchus geminatus Fieb.—Zorroza, Castrejana, Las Are- nas. Marzo, Abril, Septiembre. Tr. 7.—Heterogastrini. Heterogaster Artemisia Schill.—Las Arenas. Julio. — Urtice Fab.—Las Arenas. Platyplax Salvie Schill.—Las Arenas. Julio. Tr. 11.—Pachymerini. Rhyparochromus chiragra F.—\\ Desierto. Agosto. Stygnus pedestvis Fall.—Las Arenas. Septiembre. Microtoma atrata Geeze.— Portugalete, Agosto. Aphanus saturnius Rossi.—Las Arenas. L — vulgaris Schill.—Idem. — fini L.—Idem. Beosus luscus Fab.— Idem. — — var. sphragidimium Fieb.—Santurce. Agosto. Emblethis Verbasci Stal.—Serantes. Marzo. Notochilus contractus H. 8.—Las Arenas. Agosto. Tr. 12.—Pyrrhocorini. Pyrrhocoris apterus Lin.—Sestao. Julio. ¥. V.—TINGITIDES. Tr. 2.— Tingitidini. Div. 1.—CaNTACADERARIA. Cantacader quadricornis Lep. DE HISTORIA NATURAL. F. Vi.—PHYMATIDES. Phymata crassipes Fab. F. 1X.— HYDROMETRIDES. Tr. 3.—Hydrometrini. Hydrometra stagnorum Lin.—C. en todas partes. Tr. 4.—Veliini. Velia vivulorum F.—Las Arenas. — currens F.—C. en todas partes. Tr. 5.— Gerridini. Gerris najas de G.—La Cuadra, ete. Verano. — wgibbifera Schm|.—Idem id. — Jacustris L.—Idem id. F. X.—REDUVIDES. Tr. 2.— Reduvini. Diy. 2.—STeEnopopaRIa, Pygolampis bidentata Fourc.—Las Arenas. Oncocephalus notatus Kl.—Castrejana. Junio. Div. 4.—Repvuviaria, Reduvius personatus Lin.—Las Arenas. Pirates hybridus Scop.—C. todo el ano. — strepitans Ramb.—Las Arenas. Div. 5.—HaRPActToORaRIA. 137 Harpactor iracundus Poda,—Portugalete, Valmaseda. Junio a Agosto. — erythropus Lin.—Idem. Abril, Mayo. Coranus egyptius ¥.—Las Arenas, etc. Verano y otono. Tr. 5.— Nabini. Prostemima guttula Fab.--Valmaseda. Mayo a Agosto. Nabis lativentris Boh.— Portugalete. Agosto. — ferus Lin.—Las Arenas. — viridulus Spin.—Valmaseda. Junio. 138 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA F, XI1.—SALDIDES. Tr, 2.—Leptopodini. Salda Coksti Curt.—E1 Desierto. Marzo. Loplopus boopis Fourc.—Portugalete. Julio. F. XII.— CIMICIDES. Tr. 2.—Cimicini. Cimez lectularius L.—En las casas. Tr. 3.—Anthocorini. Lictocoris campestris F.—Portugalete. Julio. Triphleps nigra Wolff.—Las Arenas. Julio, Agosto. — levigata Fieb.—Castrejana. Julio. F, XIII.— CAPSIDES. Tr. 1.—Capsini. Diy. 3.— Miraria. Miris calcaratus Fall.—Las Arenas. — Jlevigatus L.—Lemona, etc. Abril a Junio. Megalocerea evratica L.—Lemona. Abril. Div 5.— Capsaria. Lopus albomarginatus Hah.—Las Arenas. — flavomarginatus Donov.—Serantes. Mayo. — sulcatus Fieb.—Lemona. Abril. Miridius quadrivirgatus Costa.—La Cuadra. Junio. Phytocoris Populi LL.—as Arenas. — Pini Kb.—Idem. — UlmilL.-—Santurce. Julio. — varipes Boh.— La Cuadra. Junio. Calocoris secpunctatus Fab.—Valmaseda. Junio. — — var. piceus Cyrill. —Idem id. — — var. nankineus Duf.—Idem id. — bipunctatus ¥,—Portugalete. Julio. — Chenopodii Fall.—Lemona. Abril. — vandalicus Rossi.—Las Arenas. Junio. — seticornis ¥.—La Cuadra. Junio. — roseomaculatus de G.—C. en todas partes. Verano. Di HISTORIA NATURAL. Brachycoleus bimaculatus Ramb.—Las Arenas, etc. Verano. Oncognathus binotatus F.—Portugalete. Mayo. Lygus pratensis Fab.—C. en todas partes. — campestris F.—Idem. Orthops Kalmii L.--Lemona. Abril. — — var. favovarius F.—Idem id. — — var. pauperatus H. 8.—Idem id. Liocoris tripustulatus Fab.—Las Arenas. Mayo. Cyphodema instabilis Luc.—La Cuadra. Mayo. Peciloscytus holosericeus Hah.—Idem id. — vulneratus Wolff.—Las Arenas. Mayo. Div. 8.—LABopPaRta. Halticus luteicollis Pz. Labops saltator Hah.—Valmaseda. Mayo. — minor Costa.—Portugalete. Mayo. Div. 13.—CyLuocoraria. Globiceps lavomaculatus F.—Portugalete. Mayo. Heterotoma merioptera Scop.—C. en todas partes. fleterocordylus Geniste Scop.—-Santurce. Junio. — tibialis Hah.—La Cuadra. Mayo. Div. 15.—OnNcorTyLaRia. Macrotylus Herrichii Reut.—La Cuadra. Mayo. Div. 16.—PLaGIOGNATHARIA. Psallus ancorifer Fieb.—La Cuadra. Mayo. — simillimus Kb.—Idem. — dalbicinetus Kb.—Lemona. Abril. Plagiognathus viridulus Fall.—La Cuadra. Mayo. — arbustorum ¥.—Idem. — — var. brunnipennis Mey.—Las Arenas. Chlamydatus pullus Reut.—Lemona. Abril. Luponia Hippophes Fieb. Sect. I].—HYDROCORISAS Zair. Fk. 16.— NBPIDES. Nepa cinerea Lin.—C. en todas partes. 139 140 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA F. XVIIL.— NOTONECTIDES. Notonecta glauca var. marmorea Fab.—C. en todas partes. F. XVUL.— CORIXIDES. Coriaa semistriata Fieb. IIl.— Homoptera Am. Serv. Sect. L—AUCHENORHYNCHA Dummer. F. 1—CICADIDES. Cicadetla argentata Ol.—C. en todas partes. F. I. —FULGORIDES. Tr. 1.—Fulgorini. Cizius nervosus Lin.—C. en todas partes. Issus coleoptratus Fab.—Las Arenas, Santurce. Julio. Tr. 2.—Delphacini. Stiroma Pteridis Gené.—Castrejana. Mayo. F. Ifl.—CHRCOPIDES. Lepyronia coleoptrata Lin.—Las Arenas, etc. Agosto. Aprophora Salicis de G.—Las Arenas. Marzo. — A/ni Fall.—Idem. Agosto. Ptyelus lineatus Lin.—Idem id. — spumarius L.—Idem id. — — var. ustulatus Fall.—iIdem. — — var. lateralis Lin.—Idem id. — — var. lineatus F.—Idem id. F. [V.—MEMBRACIDES. Centrotus cornutus Lin.—Las Arenas, Serantes, Portugalete. Agosto. Gargara Geniste Fab.—Las Arenas. F. V.—JASSIDES. Tr. 4.—Bythosecopini. Pediopsis scutellata Boh.—Las Arenas. Verano. . Tr. 5.—Tettigonini. Teltigonia viridis Lin.—Las Arenas. Septiembre. DE HISTORIA NATURAL. 141 Tetligonia virescens Panz.—Idem id. — — var. bicolor.—idem id. — impresso-punctata Sign.—Las Arenas. Octubre. — drunanea.—San Julian de Musques. Julio. Chiasmus translucidus M. R.—Las Arenas. Julio. Tr. 6.—Acocephalini. Eupeliz producta Ger.—Las Arenas. Septiembre, Octubre. Acocephalus striatus Fab.—Las Arenas. Septiembre. — carinatus Stal,—Idem. Agosto. — allifrons Lin.—Idem. Verano. — — var. fuliginosus Sig. — Serratule ¥.—ldem. Septiembre. — histrionicus Fab.—Idem. Verano. Tr. 7.—Jassini. Girathodus punctatus Thunb.—Lemona. Abril. Athysanus stactogalus Am.—Las Arenas. Octubre. — obscurellus Kb.—Santurce. Julio. — plebejus Zett.—Portugalete. Mayo. — variegatus Kb.—Portugalete, Santurce. Julio. Jassus miztus Fab. Tr. 8.—Typhlocybini. Chlorita Solani Kollar.» —F] Sr. Barras, de Palencia, remite la nota siguiente: «Crineo antiguo encontrado en Valdemiranda (Palencia). Regalados por D. Félix Salvador Zurita, alumno de la cate— dra de Historia natural, con destino a las colecciones de este Instituto, recibi hace poco tiempo un craneo humano con la mandibula inferior, un omoplato, dos htimeros, dos fémures y dos tibias, procedentes, segtin el donante, de una sepultura que, juntamente con otras varias, fué descubierta al final del afio anterior, 4 unos3km. del pueblo de su residencia, Herre- ‘ade Pisuerga, en una finca situada en el término de Valde- miranda. Fl numero de sepulturas encontradas fué de 30 6 40, cunei- formes, de tamano proporcionado 4 un cuerpo humano, cons- 142 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA truidas con grandes piedras, de las que dos 6 tres, 4 veces agujereadas en su centro, servian de cubierta. Al descubrirlas se encontraban llenas de tierra. FE] dueno de la finca en que se verificé el hallazgo destruyé las sepulturas para aprovechar la piedra, y enterré de nuevo los restos humanos, de los que sdlo pudo salvar el Sr. Zurita los que ha regalado a este Instituto. El estado del craneo y demas huesos, juntamente con los datos anteriores acerca de la construccidn de las sepulturas, son garantia de su gran antigiiedad, pero acaso fuera aven- turado suponerlos prehistoricos. No fué encontrado ningtin objeto de adorno, arma, etc., en el enterramiento, y tampoco hay noticia de descubrimientos annlogos en aquel sitio. En la obtencién de los siguientes datos han colaborado el mismo Sr. Zurita y algunos otros alumnos de esta cétedra. Craneo de varon. Tiene osificadas casi por completo las suturas /ambdoidea y sagital, y empezando 4 verificarlo la coronal. No hay wormia- nos de importancia. DENTICION. Faltan en la mandibula superior, post mortem, los dos inci- sivos del centro, el canino derecho, el primero y segundo mo- lar del mismo lado y el segundo y quinto del lado izquierdo. Perdidos en vida después de desarrollados faltan el segundo y tercer molar derecho y tercero y cuarto izquierdos. En la man- dibula inferior no hay falta alguna. Todos los dientes estan bastante gastados. Un golpe recibido en la extraccién 6 conduccién a Palencia produjo la rotura de los parietales, originando una gran aber- tura en la parte posterior de la béveda craniana, imposibili- tando determinar la capacidad y quitando exactitud 4 algu- nas curvas. DE HISTORIA NATURAL. PRINCIPALES CURVAS. Horizontalimaxima...... 0. ec ee a OlRaGaeate: suis ie jee ereiee: — DLCAULICU LAR <2 Jscscone Side Oa Vertical nasio-Opistica.,. 20% 1% Seas — =u NEVI GIGS, 20 «i tarts Bee — — bregmatica.......... — ==> VOIMIACAd «du. 445 edule ae Transversa total...... ae aie Be ederapatenteore — SUPCTION..6.. 0: smieleshente OTRAS MEDIDAS. Longitud del orificio occipital......... Distancia basio-palatina............ : — nasio-basica...... eGwee es ae as DISONIACA ase. ese ene = nates — bicondileo-externa..... pears. ANiqrea Ce 1ey sitiisis 44ers ata ee Distancia, Sin fisi0-COniaea.....2< 6... INDICES. dransverso longitudinal . 2.25054 4.0% Vértico-longitudinal..... teas. uBR e cate ate MENUICO-tPalSVETSON, e oco.s 50656 UGis av. 6 os Fronto-transversal maximo........... HelOri1ClO: GCE Pl tales «er sone oo st mcone Magia (8 BrOCa es, fies on anc 4.4e ee ences P — de Kollmann.......... ee ee — ‘de Virchows. ..2..8. si Poe eee SUperiOr Ue NTOCA jess wonae ve ke Seager CEL) Pieultl Oh garohe Seo ede. ohh c eee ine edie ys ia (Sy en ee ee Ses se erative PUTO! g-eseeke css We deere a Mie a 8 0 Ne Deda rams MANGTDUIAT. « 60 oo 0 610 5008 ones 555 mm. Doc 250 415 280 130 24 460 330 73,05 74,61 102,12 68,08 83,78 99 24 81,8] 114,73 78,30 76,19 52,00 92,00 50,00 143 Aunque carecemos de un ostedmetro que permita dar exac- titud 4 las medidas de los huesos largos, no estara de mas anadir que hemos obtenido las de 320 mm. para el humero, 375 para la tibia y 440 para el fémur, lo que con arreglo a la lt ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA tabla de M. Rabon da una estatura seguramente superior & 1,650 m. para el individuo enterrado. —1 Sr. Rodriguez Mourelo leyé lo siguiente: «Sobre la fosforescencia del sulfuro de estroncio. Creo haber demostrado, en mis anteriores comunicaciones, que existen ciertas materias activas, las cuales, disueltas en una gran masa de sulfuro de estroncio, le dan la propiedad de almacenar ciertas radiaciones bastantes complejas, en cuanto es sometida brevisimo tiempo 4 las acciones de la luz. Todos los sulfuros fosforescentes son impuros, y hallanse do- tados de una particular estructura, cuyo estudio sera objeto de nuevas investigaciones; los hechos a cuya exposicidn esta dedicada la presente Nota, se refieren a la excitabilidad de los sulfuros de estroncio y al mecanismo propiamente dicho de la fosforescencia. Notase un fendmeno curioso cuando se trata de provocarla; i igualdad de tiempo, tratandose de un mismo sulfuro, obte- nido siguiendo el método de Verneuil, que ha modificado la intensidad de la fosforescencia, es mayor con la luz difusa, a la sombra, que excitandola por medio de los rayos directos del sol, y mas duradera. El hecho no es privativo del sulfuro de estroncio; pues lo presentan, de igual manera, los de calcio, bario y zinc. Examinando comparativamente con igual expo- sicidn a la luz, muchas muestras del primero, he legado a reconocer que la luminiscencia es siempre mayor, en igual-— dad de tiempo, en los expuestos 4 la luz difusa y en lus exci- tados por luz directa del sol casi nunca se presenta bien definido el color propio, verde amarillento, de la fosforescen- cia del sulfuro de estroncio. En mi sentir, no toda Ja radiacién luminosa impresiona de igual manera este cuerpo; las ondas de mayor longitud son las mis eficaces, conforme lo ha demostrado M. Le Bon respecto del sulfuro de zinc. La parte no visible de la luz, constituye, en el caso presente, lo mas activo, la verdadera fuerza exci- tadora, porque si la intensidad de la fosforescencia se relacio- nara con la de la luz que la provoca, mayor seria la del sulfuro de estroncio expuesto 4 los rayos directos del sol, y sucede precisamente lo contrario. De otra parte, cuando un sulfuro DE HISTORIA NATURAL. 145 de estroncio ha sido expuesto una vez solo 4 la luz difusa, no solo fosforece con gran intensidad, sino para lo sucesivo, adquiere mayor grado de impresionabilidad; en cambio, la repetida insolacion la disminuye de modo bien perceptible, pudiendo hasta Hegar 4 anularla. Por virtud de semejante propiedad es posible aumentar. aunque no de modo indefinido, la sensibilidad de los sulfuros fosforescentes y aun la intensidad de la misma fosforescencia. Colocados en tubos de ensayo bien cerrados y expuestos pe- riddicamente a la luz difusa durante algunos minutos y guar- dados luego en una caja cerrada, he conseguido tener sulfu- ros de estroncio extraordinariamente sensibles; al cabo de tres anos de preparados se excitan con la luz de una bujia en al- gunos segundos, brillan en la obscuridad y conservan horas enteras su fosforescencia de color verde. A fin de probar que no son las radiaciones luminosas las mas eficaces respecto del fendmeno objeto de mis estudios, he practicado experimentos directos, cuyo resultado no da lugar a dudas de ningin g@énero. Habiendo impregnado de barniz que contenia sulfuro de estroncio pulverizado, una hoja de papel, tratando de secarla, fué expuesta al calor, poniéndola a cosa de 1 m. del fuego, y lucié de tal modo que la fosfores- cencia era perceptible a plena luz: el calor de los hornos de was usados en el laboratorio, y cuya llama es apenas visible, provoca asimismo la fosforescencia, conforme lo he compro- bado con repetidos experimentos. Calentando una lamina de hierro, sin que llegue a la temperatura del rojo, y colocando sobre ella durante un minuto un tubo con el sulfuro de es- troncio obtenido por mi procedimiento, éste, Levado en segui- da a la obscuridad, fosforece con gran fuerza, como si lo hubiera excitado la luz difusa. Puesto el mismo sulfuro de estroncio en polvo grueso sobre la lamina de hierro calenta- da, pero no enrojecida, no tarda en emitir luz verde bastante intensa, desarrollandose por este medio la fosforescencia. Ofrecen los productos que he obtenido otra particularidad digna de estudio; un sulfuro fosforesciendo con su intensidad maxima puede excitar 4 otro. Para demostrarlo, he colocado en la obscuridad y entre dos tubos que contenian sulfuro de estroncio en plena fosforescencia, otro, también con sulfuro de estroncio pero no excitado; al cabo de cinco minutos, los tres ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.— MAVO, 1899, 10 146 ACTAS DE LA SOCTEDAD ESPANOLA tubos daban luz verdosa; la del tubo del medio mucho menos intensa es cierto, y también menos duradera. En estos casos he operado siempre con sulfuros de estroncio sumamente ex- citables y activos. No son menos curiosos los fendmenos de autoexcitacién que tengo observado; para estos experimentos se eligen los sulfu- ros mas fosforescentes, aquéllos capaces de lucir en la obscu- ridad con una exposicién brevisima a la luz difusa. Estos cuerpos, en polvo fino, van colocados en frascos de vidrio de 250 em. llenos hasta los dos tercios, y bien cerrados para evi- tar todo contacto con el aire; la luz sdlo toma acceso a la superficie superior del sulfuro; llevado a la obscuridad, a los diez segundos de exposicién, podia verse cémo la luz habia penetrado hasta el fondo del frasco, toda la masa del cuerpo era fosforescente; pero en ella advertianse como zonas de intensidad decreciente, las cuales indican el modo cémo la excitacién de un punto se ha propagado a toda la masa del sulfuro de estroncio. Aqui parece que la porcidn de substan- cia que ha adquirido la luminiscencia sirve para excitar a las demas, comunicandoles la propiedad por ella adquirida de la luz directa: el tiempo no ha podido apreciarse, mas si las di- ferencias de intensidad luminosa. He llamado 4 este fendmeno autoexcitacidn, no sdlo aten- diendo 4 su mecanismo sino a las causas que lo provocan, ligadas 4 los hechos antes expuestos respecto de las acciones de la luz difusa y de las radiaciones obscuras. Para mi, la luminiscencia es solo la exteriorizacion de las actividades del sulfuro de estroncio fosforescente; al exponerlo a las radiacio- nes difusas, en él se desenvuelven dos clases de energias, una de ellas demostrada en la propiedad de emitir luz verde ama- rillenta, la otra patentizada, conforme demostraré 4 su tiempo en determinadas actividades quimicas que los sulfuros de es- troncio manifiestan luego que han cesado de emitir luz. Asi acaba de demostrarlo M. Le Bon, cuyas investigaciones se comprueban con las mias que en breve publicaré. La emision de luz es un fendmeno de la fosforescencia; pero no toda la fosforescencia, hecho en extremo complejo, dependiente de muchas circunstancias y en particular del modo de agrupacién de las substancias que le presentan. Hs un conjunto de activi- dades determinada por la disolucién de una pequena cantidad DE HISTORYA NATURAL. 147 de ciertos cuerpos, llamados activos en una gran masa de otros, operando siempre a temperatura muy elevada.» SECCION DE SEVILLA. Sesi6én del 12 de Abril de 1899. PRESIDENCIA DE DON MANUEL DE PAUL. —Se leyé y aprobo el acta de la sesién anterior. —Se did lectura 4 la siguiente nota remitida por el Sr. Gal- deron: «Baamen de algunas vrocas cristalinas de la provincia de Cordoba. recogidas por D. Lucas Mallada. Aunque en numero no muy crecido de ejemplares prepara- dos, hemos podido reconocer, en varios recogidos por el senor Mallada, en sus correrias por la provincia de Cordoba, algunos de los tipos principales dados 4 conocer por el Sr. Macpherson, al describir el Norte de la provincia de Sevilla (1). La facies petrografica de dichas dos provincias confinantes, es esencial- mente la misma, como se comprende facilmente: asi es que todas las consideraciones generales consignadas en tan impor- tante trabajo tienen aplicacidn a Cordoba, sin que haya nece- sidad de repetirlas aqui. Tampoco es nuestra misidn ocupar- nos en los datos de localidad y yacimiento de dichas rocas. que sélo puede realizar el Sr. Mallada, que las ha recogido y que tan 4 fondo conoce la estructura geoldgica de la regidn. Las siguientes indicaciones se limitan, por consiguiente, a un ligero examen petrografico de tos citados materiales, sin otro aleance que el de comprobar las observaciones expuestas por el Sr. Macpherson en sus trabajos sobre Sierra Morena, y los del Sr. Mallada, que veran pronto la luz, sobre la provincia dle Cordoba. Granito. Los ejemplares de esta roca recogidos en la provincia de Cordoba, no presentan particularidades que no hayan sido ci- tadas por el Sr. Macpherson al describir las del Norte de 11 provincia de Sevilla en su citado trabajo. (1) Boletin de la Comision del Mapa geoldgico de Espana, tomo v1, 1879, 148 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Solamente recordaremos, por su estructura singular, un gra- nito de grano fino, indudablemente del contacto con otras ro- cas, probablemente pizarrosas, cuya procedencia exacta igno- ramos. Es notable dicho ejemplar por el aspecto geneisico que ofrece, debido @ la orientacién de sus elementos. Los cuarzos estan triturados y como empujados en lineas rectas, y al mis- mo tiempo formaciones cloriticas de origen secundario se dis- ponen también en fajas prolongadas, contribuyendo 4 prestar a la roca el aspecto estratificado que la distingue. Sienita. Pertenece a este grupo una roca de estructura granitoidea y grano mediano, procedente del Piconcillo, en la que destacan i simple vista muchos cristalitos blanquecinos de feldespato, de una pasta bastante obscura. En las secciones delgadas se ven como elementos preponde- rantes anfibol, de color verde claro, y ortoclasa. El anfibol forma cristales alargados en el sentido del eje cristalografico, generalmente rotos en el mismo y algo remo- vidos por acciones que les han hecho perder en orientacién. Su dicroismo es muy intenso y les planos de crucero perfecta- mente marcados (1). Como inclusiones tiene granos de mag- netita bastante abundantes, y agujas de apatito. La ortosa es casi siempre muy turbia y de contornos redon- deados; sin que deje de haber algunos trozos bien didfanos y que muestran vivos colores a la luz polarizada, Frecuentemen- te aprisiona laminas de plagioclasa. Como inclusiones, las principales son de apatito, si bien en individuos tan pequenos que sdlo se aperciben con grandes aumentos. Integran, ademas, en la constitucién de esta roca hie7vo magnetico y titanifero, en bastante cantidad, fragmentos de cuarzo no escasos, diafanos, y con vacuolas abundantes, a tre- chos, algunas hojuelas de epidota, de color verde, y con mas escasez ciertos granillos, sobre cuya naturaleza no puedo de- cidirme sin un examen de mayor niimero de ejemplares. La roca ofrece una franca estructura granitica, lo cual, uni- (\) En algunos sitios adquieren una estructura fibrosa, y localmente cambia su color verde claro por un tono que tira 4 castano, DE HISTORIA NATURAL. 149 do a la escasez relativa del cuarzo, permite clasificarla como una sienita bien caracterizada. Porfidos. Kl numero de ejemplares con que contamos no es suficiente para intentar una clasificacién metodica de los tipos de porfi- dos tan abundantes que existen en la provincia de Cordoba. Por otra parte, el Sr. Macpherson ha tratado este linaje de cuestiones con detenimiento suficiente, tanto en su «Estudio gweoldgico y petrografico del Norte de la provincia de Sevilla,» como en su trabajo sobre «Las relaciones de las rocas grani- ticas y porfiricas (1). En este ultimo, sobre todo, ha mostrado como las rocas porfiricas de Andalucia y Guadarrama por él estudiadas corresponden a estadios del proceso de la porfiriza- cion, por cuya virtud existen numerosos transitos de los diques porfiricos a las rocas graniticas en que habitualmente arman. La Sierra de los Santos y la parte occidental de la provincia de Cordoba fueron ya mencionados por este eminente gedlogo como campo de comprobacidn de sus investigaciones. Nuestro proposito va 4 quedar reducido 4 los modestos Hmi- tes de indicar los caracteres principales de los tipos porfidicos que se descubren entre los ejemplares cordobeses recogidos por el Sr. Mallada, sin entrar 4 averiguar las relaciones de unos con otros ni con otras rocas. El fipo comin, del cual tenemos a la vista ejemplares de Vi- llanueva del Rey, Los Aviones, y que abunda mas, es de un color rojo generalmente de ladrillo, cuyas superficies, expues- tas a la intemperie, se alisan y llenan de pequenas cavidades, debidas a la desaparicidn de los cristales porfidicos. La pasta suele ser de grano grueso, y aprisiona maclas de feldespato brillante, de color de carne y mas escasos cristales de mica 6 grupos de clorita. No hemos visto ninguno anfibdlico. El porfido cuarcifero propiamente dicho es también muy fre- cuente. Tenemos a la vista ejemplares de color blanquisimo del Castillo de Almodovar y rojos de Bélmez y la Canada del Gamo. El grano de la pasta suele ser bastante fino, y los cris- tales 6 granos de cuarzo empastados numerosisimos, tanto (1) ANALES DE LA Soc. ESP. DE HIST. NAT. t. Ix. 150 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA perceptibles sélo con la lente, como de mayor dimensién. Hay ademas cristales alargados brillantes de feldespato, que cuan- do desaparecen en las superficies de la roca expuesta 4 la in- temperie, adquiere ésta un aspecto poroso, el cual recuerda mucho el de las traquitas, como sucede en un fildn de Bélmez. El tipo micro-cristalino es excepcional; pero sin embargo, se presenta alguna vez en la provincia, como sucede en los Pe- droches, donde es de color de carne, con algunos cristales de feldespato mas claros. El Sr. Macpherson (1) ha mencionado esia roca, que en seccién transparente aparece constituida por una base casi hialina, en la que se perciben cristalillos abun- dantes y grumos opacos de feldespato que pueden proceder de la desintegracién de los empastados porfidicamente; pero exa- minando la base en luz polarizada, se ve que ademas esta cua- jada de cristalillos hialinos feldespaticos de contornos puros, los cuales deben su origen, segtin él, @ una nueva individua- lizacién del magma. Algunos ejemplares de esta misma loca- lidad, como los de las cercanias del Viso, contienen granos de euarzo porfidicamente empastados, y uno de ellos ha sido des- crito y figurado por dicho gedlogo, por ofrecer la circunstancia de hallarse curiosamente recortado por el magma que le en- vuelve, siendo de notar que por una de sus esquirlas se inyec- tan dos hilos del magma porfidico, el cual penetra hacia el interior del cristal reproduciendo sus aristas regulares (2). Al tipo pegmatitico, descrito también por el Sr. Macpherson en ejemplares de la provincia de Sevilla, pertenecen algunos cordobeses de color de carne procedentes de Piconcillo y Fuen- teovejuna. Empastan cristalillos feldespaticos del mismo color que la roca y granos cuarzosos, mas algunos productos clori- ticos. La estructura es idéntica 4 la que caracteriza a las peg- matitas, y puede provenir, segtin dicho gedlogo, de que la roca experimentara una especie de infiltracién que, desintegran- dola por todas sus partes, la hubiera transformado en una masa aparentemente homogénea. Es epidotifero un ejemplar procedente de la dehesa de Ba- rreras, Posadas, y curioso por la total transformacién de sus ortosas porfidicas en epidota. En los pérfidos no cuarciferos (1) Op. cit., pag. 156. (2) Op. cit., pig. 154 y fig. 3, lm. V. DE HISTORIA NATURAL. 151 dle Sevilla la pasta es la que sufre dicha transformacion, al paso que en éste son los cristales porfidicos los cambiados en epidota. A los porfidos feldespaticos pertenece un ejemplar muy bello procedente de San Jeronimo, en el que se ven grandes orto- clasas porfidicas, numerosos y grandes cristales de anfibol, laminas de mica y algo de clorita. Tiene la facies de los pér- fidos cuarciferos mejor caracterizados, pero carece de cuarzo. Semejante roca, que corresponderia a lo que Rosenbusch Hama porfidos sieniticos, es sumamente rara en Sierra Morena, y valdria la pena de recoger nuevos ejemplares para su estudio nas completo. Por ultimo, en las salbandas, y en general en los contactos, se presentan variedades de porfidos dificiles de definir, a ve- ces con aspecto estratificado, como uno procedente de Almo- dovar, kil. 25 Diabasas. Aunque no son muchos los ejemplares de diabasas de la pro- vincia de Cordoba de que hemos dispuesto, con todo figuran entre ellos unos de textura claramente cristalina, como uno de La Cardenchosa, otros afaniticos y compactos, y otros que ofrecen el término medio entre ambos. Hay ademas otro pro- cedente de Fuenteovejuna que representa, como luego dire- mos, un tipo distinto de los restantes. En los ejemplares francamente cristalinos se perciben a veces a la simple vista, como elementos dominantes, cristales de feldespato blanco-verdosos que miden hasta 6 mm., y entre ellos un bisilicato verde-obscuro, que es el piroxeno, productos de color verde mas claro y chispas de pirita. En las secciones delgadas se ve que el aspecto porfidico que suelen presentar estas rocas, a la simple vista es sdlo aparente, y que la estructura de ellas corresponde en realidad a la pro- pia de las diabasas. La plagioclasa dominante es el labrador en cristales alarga- dos, que en los ejemplares frescos y tipicos, como el de Santa Maria, de Hornachuelos, presenta bellas bandas polisintéticas y vivos colores a la luz polarizada. Hay otros cristales que pa- recen corresponder a otra plagioclasa, probablemente a la oli- goclasa. 152 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA El pirvoreno se presenta en grandes y bellos cristales, gene- ralmente de color violado 6 amarillento y agrietados. La clorita es abundante, y no es raro ver la transformacion en ella de la augita. La magnetita, siempre irregularmente distribuida, es fre- cuente en unas de nuestras preparaciones y escasa en otras. La citada diabasa de Hornachuelos presenta bastantes gra- nillos aislados de aufibol de color castano, muy dicroicos, cerca cweneralmente del piroxeno, pero no en cantidad que comuni- quen 4 la roca caracter dioritico. Otros ejemplares de Fuenteovejuna y otros sitios se distin- gwuen bastante de estas diabasas tipicas, tanto exteriormente por su grano mucho mas fino y aspecto criptocristalino y no porfidico, como en las preparaciones, por ser en él escasisima la clorita, y en cambio profusamente repartidos la magnetita y otros minerales ferruginosos. En Fuenteovejuna recogié el Sr. Mallada un ejemplar muy bello de diabasa distinta por su estructura general de los tipos ahora mencionados. Diriamos por/idica a esta variedad para distinguirla de las otras, queriendo indicar que en su forma- cion se reconocen claramente dos periodos: uno el de la géne- sis de los elementos macrocristalinos, y otro de produccién de los restantes minerales de la roca, los cuales vinieron como a adosarse 4 aquéllos. Los segundos presentan una disposicion 6 estructura alevin tanto fluidal. Eufotida. Los ejemplares pertenecientes a esta especie que poseemos, proceden de dos afloramientos proximos 4 San Calixto, y uno de Villaviciosa. La roca aparece constituida, 4 la simple vista, por grandes cristales de feldespato predominantes, de color blanco verdoso, y otros verdes intensos, de un elemento ferro-magnesiano, con caras de esfoliacion brillantes. Se perciben también con la lente chispas de pirita. Al microscopio se ve que el feldespato es un /abrador en voluminosos cristales, que moldean A los verdes, que son de dialagwa. El primero es muy turbio y esta plagado de inclusiones, to- DE HISTORIA NATURAL. 153 mando a trechos la estructura en haces de la saussurita. Aleu- nos son diafanos a trechos y turbios en el resto. La dialaga esta también muy llena de inclusiones, alineadas segun dos direcciones rectangulares. El crucero principal es muy marcado. Kn un ejemplar se halla completamente inva- dido este mineral de productos cloriticos, 4 los que debe el co- lor verde intenso que presenta a la simple vista. En la de Vi- llaviciosa la dialaga constituye magnificos y muy frescos cris- tales sumamente resquebrajados. En los bordes de la dialaga existen a menudo fragmentos de contorno irregular de avfibo/ de color castano. En trozos dispersos por la preparaciOn abundan cuerpos opa+ cos, que seran pirita y magnetita, inclusiones de apatito, algu- nas laminillas de oligisto, y productos serpentinosos y cloriticos. Kn algunas es notable la clorita, porsu frescura y su cantidad, estando en fragmentos y en vetas que atraviesan todos los mi- nerales. Es muy dicroica y fibrosa en ciertos sitios. Es notable la abundancia de cwarzo en el labrador de un ejemplar de Tres Mojones, en fragmentos limpidos, el cual debe ser un producto secundario de dicho feldespato, asi como cier- tas venas que le atraviesan en la direccién de los cruceros. Dentro de este cuarzo suelen verse usando bastante aumento muchisimas agujas de apatito. Ofita. Procede de entre Benameji y Jauja una roca compacta, de un color verde intenso, que parece casi negro, granudo-cristalina, muy fresca, de gran densidad y bastante interesante. Contiene muchos cristales porfidicos, pero de pequeno tamano; los ma- yores son unos fragmentos irregulares, de color amarillo ver- doso, brillantes, con cruceros muy marcados; pero estos frag- mentos no abundan mucho ni suelen pasar de algunos mili- metros. En mayor profusion existen cristalitos de color verde, algo mas claros que la pasta, los cuales desde luego se reco- noce son feldespaticos. En las secciones deleadas se ve que la roca esta constituida por una base obscura, en la que se distinguen muchisimos trozos y cristalitos de piroxeno de color castano, asociados a cristales menudos de plagioclasa y granos de magnetita. 154 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Kn estado porfidico lo que mas abundan son los fragmentos y cristales de plagioclasa, siendo de notar que unas consisten en cristales alargados turbios, al paso que las mayores son cor- tas, en grupos muy diafanos; y a pesar de estar bastante res— quebrajados, en algunos puntos revelan muy bien su estruc- tura polisintética. Corresponden, sin duda, 4 dos especies dis- tintas. Los de piroxeno porfidico son menos frecuentes, y algunas secciones muestran muy bien las caras del prisma. Interior- mente estan transformados en productos serpentinosos, de donde resulta que ofrecen un color olivaceo, que no es ya el del piroxeno primitivo. En su borde suele haber una zona obscura, debida, sin duda, a productos ferruginosos. El estado de pro- funda alteracion de estos cristales contrasta de un modo cu- rioso con lo fresca que se halla la roca y la diafanidad de sus plagioclasas. Se trata de una ofita micro-cristalina muy bien caracterizada, de un tipo descrito, salvo diferencias de detalle, como frecuente en la provincia de Cadiz por el Sr. Macpherson» (1), —Se did lectura 4 la siguiente nota remitida por el Sr. Barras: « Datos para la florula sevillana. Fam. Borraginaceas. (Continuacion.) Lithospermum apulum Vahl.—De Dos Hermanas a Sevilla (Pau!). — arvense L..—Sevilla. Nonnea nigricans DC.—Sevilla; Aleala de Guadaira; San Juan dc Aznalfarache; Vega de Triana (Pau!); Huévar (Paul!). Fam. Solanaceas. Solanum nigrum L.— Sevilla. Muy frecuente en toda la pro- vincia. — — var. sufruticosum Suchboe.—Sevilla. — miniatum W.—Sevilla. — Dulcamara L.—Sevilla. — Bonariense L.—Sevilla. (QSubespontanea.) 1) Sobre las rocas eruptivas de la provincia de Cadiz —ANAU. DE LA Soc. Esp. Dr Hist. Nart., t. v. DE HISTORIA NATURAL. 155 Solanum Sodomeum L.—Sevilla. — tuberosum L.-—Sevilla. (Cult.) — jasminoides Paxt.—Sevilla. (Cult.) — Melongena L.—Sevilla. (Cult.) Lycopersicum esculentum Mill.—Sevilla. (Cult.) Capsicum annuum L.—-Sevilla. (Cult.) Physalis Athehengi L.—Sevilla. Lycium barbarum L. (vulgare Dum.)—Sevilla. Comtin en toda la provincia. Mandragora autumnalis L.—Sevilla; Vega de Triana. Withania somnifera Dun.—Dehesa de Gascon, Marchena; San- lucar la Mayor. Cestrum nocturnum Murr.—Sevilla. (Cult.) Habrotamnus elegans Brogn.—Sevilla. (Cult.) Datura Stramonium L.—Sevilla. — Tatula L.—Sevilla. — Metel L.—Sevilla. Nicotiana Tabacum L.—sSevilla. — glauca L.—Ssevilla. (Subespontanea.) Hyosciamus niger L.— Sevilla; Alcala de Guadaira; Huévar (Paul!‘; Almonte. — albus L.—Sevilla; Aleala de Guadaira. Petunia violacea Lindl.—Sevilla. (Cult.) Triguera ambrosiaca Cav.—Sevilla, Ventas de Guadaira; Cues- ta de Castilleja. Fam. Verbascaceas. Verbascum Thapsus L.—Sevilla; Vega de Triana; Moron (Cala!). — virgatum With.—Sevilla; Castilleja de la Cuesta. — sinuatum L.-—Idem. — pulverulentum Vill.—Idem. Celsia Barnadesi’ G. Don.—Utrera. Fam. Escrofulariaceas. _ veronica hederefolia L.—Sevilla; Dehesa de Gascon, Marche- na. En Sevilla he encontrado ejemplares hibridos de ? — didyma Ten.—Sevilla. — agrestis L.—Idem. — arvensis L.—Idem. — Anagallis L,—¥l Pedroso de la Sierra. 16 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Scrophularia Scorodonia L.—Sevilla. — aquatica ..— "Kl Pedroso de la Sierra. — frutescens L.—Sevilla. — sambucifolia L..—Sevilla; Cortijo de Tercia; de Dos Her- manas a Sevilla (Pau!). — canina \..— Castilleja de la Cuesta. Antirrhinum Orontium L.—Alcala de Guadaira; Dos Hermanas, — majus L..—Sevilla; Alcala de Guadaira. - — molle L.—Sevilla. — junceum L.—Idem. Linaria Cymbalaria Mill._—Idem. — spuria Mill.—El] Pedroso de la Sierra; Vega de Triana; Castilleja de la Cuesta. SECCION DE ZARAGOZA. Sesion del 26 de Abril de 41899. PRESIDENCIA DE DON JOSE A. DOSSET. —Se leyé y aprobo el acta de la sesion anterior. —(Juedé admitido como socio numerario Alavés (D. Demetrio), presentado por los Sres. Aramburo y Moyano; y como socios agregados Desp (D. Ramon), Herranz (D. Clemente), presentados por D. Félix Gila. —E] Sr. Vicioso, de Calatayud, leyo lo siguiente: «Con motivo de la muerte del sabio liquenélogo M. Nylander, Le Journal des Debats del 8 de Abril ha publicado un corto ar- ticulo firmado por su amigo y colega M. A. Boistel. Mientras las Revistas especiales preparan mas extensas biografias del maestro de todos, me he permitido traducir el articulo de re- ferencia, el cual, en breves rasgos, retrata al insigne lique- nologo. Parece que ya el invierno pasado tenia presentimientos de su muerte, pues en su tiltima carta me decia: «Les jours sont si courts et si sombres; impossible de vous servir avant le mois de mars, s/ Je suis encore en vies» y precisamente al finar Marzo DE HISTORIA NATURAL. 157 ha perdido la Liquenologia al hombre que mas la habia enal- tecido.» El Dr. Nylander. «Kn una modestisima habitacién del barrio de Plaisance fa- llecia en la semana ultima un sabio que ha ocupado un elevado puesto en la ciencia contempordanea. Consagrado exclusiva- mente desde hace muchos anos 4 una rama especialisima de la botanica criptogamica, limitando sus estudios a la humilde clase de los iquenes, el Dr. Nylander habia adquirido entre los adeptos a esta Ciencia una reputacion universal; su autoridad era reconocida por los sabios de todo el mundo. Su clasifica- cidn, los procedimientos de determinacién que habia preconi- zado eran seguidos en la casi totalidad de las obras que han tratado este ramo de cuarenta anos a esta parte. Desde los mas lejanos paises se le pedian, ya consejos, ya su parecer sobre puntos litigiosos, y se le enviaban muestras para las que se so- licitaba una determinacion hecha por él. Era un triunfo, aun para los botanicos mas experimentados, poder recibir de él la confirmacidn de los resultados obtenidos por ellos 6 el esclarecimiento de sus dudas. Su erudicidén era inmensa, su memoria maravillosa. Después de haber descrito, ya en sus grandes obras, ya en una infinidad de folletos y de articulos de revistas mas de 10.000 especies de todas las regiones del globo, sabia encontrar inmediatamente, discerniendo ca- ‘acteres en extremo delicados, los nombres de los ejemplares que se le dirigian. Desde hace algtin tiempo sus fuerzas habian disminuido, el trabajo se le hacia cada dia mas penoso, y, sin embargo, du- rante los afios 1896, 1897 y 1898 did 4 luz un catalogo razonado de los Liqguenes de las inmediaciones de Paris, en dos entregas, y una lista de los Ziguenes de las islas Azores, inspirando a la vez numerosos trabajos 4 sus diversos corresponsales, Vivia en el aislamiento mas completo, a pesar de los modestos beneficios que hacia a4 los pobres, de los que estaba rodeado en aquel populoso barrio. Sus rarezas de caracter le habian enajenado muchas simpa-= tias. Afectando el mayor desdén hacia las necesidades mate- riales de la vida, no habia podido soportar jamas sin disgusto toda tentativa de desorden, ni aun permitia que sacudieran el 158 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA polvo a los montones de folletos, cartas, muestras, cartones de herbario que cubrian sus mesas, su chimenea, todos sus mue- bies y el piso de sus dos habitaciones hasta la altura de la mano; y en estos montones asomaban aqui y alla, su micros- copio, sus frascos de reactivos, algunas botellas de vino y un frasco de boca ancha con cerezas en aguardiente, con las que completaba sus modestas comidas. Muy suspicaz por todo lo que se relacionaba, ya con su inde- pendencia personal, ya con su autoridad cientifica, tomaba por muestras de ingratitud y de hostilidad personal toda tentativa de discusion acerca de las opiniones que habia dado 6 por no seguir las doctrinas que él profesaba; rompid poco a poco toda clase de relaciones con los que habian sido sus discipulos, y que conservandole el mayor reconocimiento, querian, sin embargo. trabajar libremente el vasto campo de la naturaleza; y aun aquel de quien aceptaba con gusto las visitas, sabia muy bien que no convenia renovarlas muy 4 menudo, y que toda senal de solicitud en la que hubiera creido ver un germen de indis- crecién, hubiera cerrado inexorablemente la puerta del maes- tro admirado é infeliz. Su magnifico herbario, que encierra incomparables riquezas cientificas volvera, seg@uin se dice, a Helsingfors, su ciudad na- tal, la que desde hace mucho tiempo le pasaba una pequena renta anual. Lastima que Francia, su pais adoptivo, cuya flora ha ilustrado con gran numero de trabajos, no pueda conservar en sus Museos un tesoro tan precioso.» Con este motivo el Rdo. P. Navas did noticias de su corres- pondencia con el Dr. Nylander, refiriendo las gestiones que verificd, por cierto no del todo estériles, para hacer algun bien, hasta pocos dias antes de su muerte a tan célebre como por varios conceptos desgraciado sabio. —E]l Sr. Soler participé una observacion que puede tener in- terés para la agricultura espanola. Es ella, la avidez conque las abejas acuden 4 las flores del mesembriantemo que alfom- bra nuestros jardines. En los de la plaza de Aragon ha notado diariamente en esta temporada, que al abrirse las flores acu- den 4 ellas 4 bandadas las abejas, hallandose apenas una flor en que no chupe alguna de ellas el codiciado néctar. Como el mesembriantemo es planta que exige muy pocos cuidados, po- dria ensayarse su cultivo en las cercanias de los colmenares. DE HISTORIA NATURAL. 159 —El Sr. Pau, de Segorbe, remite la nota siguiente: «Datos para completar la historia de la «Salicornia fastigiata» Loscos et Pardo. Esta planta, que no se conocia mas que por las colecciones de Loscos, y anos mas tarde por las del Sr. Zapater (prado de Masegar, Sierra de Albarracin), existe también en Castilla la Nueva. En el mes de Mayo, saliendo de Ciempozuelos en direccién a Valdemoro, encontré algunos esqueletos que me parecieron pertenecer con seguridad a la Salicornia fastigiata. Como el descubrimiento era muy extrano entonces, importaba procu- rarse la planta en buenas condiciones para no dejar en el ani- mo de los naturalistas la mas remota duda sobre el hallazgo. No sabia 4 quién dirigirme para que hiciese el sacrificio, tni- camente por amor a la ciencia, de recorrer y estudiar las cer- canias de Ciempozuelos y proporcionarme ejemplares en buen estado: asi es, que no tuve mas remedio que ponerme otra vez en camino y a mediados de Agosto del mismo ano de 1897, sali en direccion de Madrid en busca de tan curiosa como rara planta. Habiendo tenido la suerte de dar con una colonia junto a la misma via férrea y antes de salvar los ultimos ce- rrillos de Ciempozuelos, ha quedado resuelto que se trata del mismo vegetal. Loscos, en el Suplemento 5.° nos dice: «El Sr. Willkomm, eu »las L/lustrationes, ha publicado la historia incompleta de esta »bella planta con arreglo a los datos dispersos que yo le habia »comunicado.» Y procura completarla cinéndose a sus tra- bajos. Puede leerse en ambos autores las vicisitudes por que paso esta modesta especie hasta lograr los nombres de J/crocne- mum fastigiatum Une. St. Pero Willkomm, llevado del amor a nuestras cosas, escribiéd la adjunta lamentaciOn, que es la causa de redactar esta nota. «M. de Ungern-Sternberg ha tenido razon y ha fundado bien »un @énero nuevo con esta planta, que se distingue por la »falta de célis (perigonio) de todos los géneros conocidos de la »tribu Salicornieas; pero siento en el alma que el ilustre autor »de las salicornieas haya dado a4 este género nuevo un nombre »tan poco conveniente y tan poco justo. gQué quiere decir el 160 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA »nombre Microcnemum? gSignifica que la planta en cuestidn »se asemeja & un pequeno Actrocnemum? Entonces podia darse »este nombre también 4 la Salicornia herbacea. Ahora bien; »yo hubiera querido que una planta que constituye un género »nuevo monotipico, pero que habita en Espana y que ha sido »descubierta como especie nueva por un botanico espanol »bien conocido, hubiera recibido el nombre del sabio descubri- »dor y el del pais donde crece. El J/icrocnemum fastigiutum »hasta ahora no se ha encontrado mas que en aquella parte »del Mediodia de Aragén, donde reside el Sr. Loscos; él es, él »sdlo, el que ha recogido esta bella planta en las localidades »arriba mencionadas, que ningtn otro botanico sino él ha »explorado; él ha distribuido su planta por centenares de »ejemplares a los botanicos y museos de toda la Europa sin »que haya recibido la menor recompensa por sus gastos y por »su celo. Por consiguiente, 4 mi parecer esta planta tan cu- »riosa y tan rara debiera llamarse Loscosia Avagonensis. Pero »seguin las leyes de la nomenclatura botanica ya es imposible »anular el nombre genérico dado.» Los estudios que de esta especie tengo hechos en vista de mis recolecciones de Castilla, me permiten exponer que esta planta ya fué recogida por Barrelier en Castilla la Nueva en el siglo xvi; y en prueba de esta afirmacién véase la es- tainpa 192 bajo la denominacion de Aali geniculatum. No creo que nadie dude de que Barrelier estuviera por aqui, porque entonces le citaria: «Hujus aurora scientiw ductus, Valentize Castilieque Regnorum...», que se lee en la vida puesta al fren- te de la obra. Respecto a que sea imposible anular el nombre impuesto por Ungern-Sternberg, opino que apoyandose en las leyes in- ternacionales de nomenclatura cabe facilmente y debe hacer- se, porque Linneo propuso ya el mismo nombre MMZ/icrocne- mum en la edicidn sexta de su Genera plantarum. Seguin ésto, débese admitir el género Loscosia ast: Loscosia nov. nom. Microcnemum Ung. St., 1876 (non. L. Gen. pl., v1, 1764.) Y las especies en la sinonimica siguiente : Loscosia Aragonensis Willk.—Salicornia fastigiata Loscos et -ardo mss.—Arlhrocnemum corallioides Loscos et Pardo.—IM- crocnemum fastigiatum Ung. St.—Kali geniculatum Barrelier. DE HISTORIA NATURAL. lol Sesion del 7 de Junio de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. —Se leyo y aprobo el acta de la sesién anterior. —(Quedaron admitidos como socios numerarios los senores Martin Ayuso (D. Dionisio), Catedratico de Agricultura en el Instituto de Oviedo, y Graino (D. Celestino), Doctor en Farmacia, residente en Avilés (Asturias), presentados por D. Antonio Martinez y Fernandez; Dominguez (D. Antonio A.), de Santa Cruz de Tenerife, presentado por D. Anatael Cabrera; Gallegos y Sardina (D. Ventura), de Mendoza, en la Repu- blica Argentina, presentado por D. Ignacio Bolivar. —Se hicieron dos nuevas propuestas de socios numerarios. —Se acordéd aceptar el cambio de publicaciones con la So- ciedad entomoldgica de San Petersburgo por su _ periddico Hore Societlatis entomologice Rossice, y con la Revista chilena de Historia natural, que publica el Museo de Valparaiso, y conceder todo género de facilidades al Doctor H. H. Field, de Ziirich, Director del Concilium Bibliographicum, a fin de que sean registradas en la gran bibliografia internacional las ob- servaciones que se han publicado en nuestros ANALES, ponién- dose de acuerdo con él acerca de la mejor manera de hacerlo. —HEl Sr. Bolivar manifest que habia quedado entregado en el Banco de Espana el producto de la suscripcién en favor de la familia de D. Marcos Jiménez de la Espada, y que se habia remitido al Sr. Secretario de la R. Academia de la Historia la lista de los socios que han contribuido a ella, con expresién de las cantidades que entregaron. También manifestd que se habia comunicado al Gobierno civil de Madrid el balance ulti- mo de cuentas y la lista de socios que forman la Junta Direc- ‘tiva, en cumplimiento de‘las disposiciones-vigentes. ACTAS DE LA SOC ESP. DE I. N.— JUNIO, 1899. 1] 162 ACYTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Participé, por ultimo, ala Sociedad que, segtin cartas del Sr. Martinez Escalera, nuestro consocio, acompanado de su hermano D. Fernando, habia llegado 4 Bagdad en el mes de Marzo. Desde alli, segun noticias posteriores, se dirigieron 4 Amarah, donde desembarcaron cruzando el territorio de los Beni-Lam, tribu arabe de costumbres tan barbaras, que se consideraron muy afortunados de haber salido sanus v salvos de entre ellos. En Susa fueron recibidos por los Sres. Morgan y el P. Schail, que componen la misién francesa que esta ha- ciendo grandes excavaciones por cuenta del Gobierno francés con el fin de recoger objetos para el conocimiento de la histo- ria de aquellas civilizaciones, en lo que llevan gastadas sumas considerables. Alli descansaron seis dias. Los resultados de la expedicidn del Sr. Escalera no dejan de tener ya alguna im- portancia aun cuando él no se muestre satisfecho. Todo lo recogido ha quedado depositado en el convento de Carmelitas de Bagdad, cuyo P. Prior, nuestro compatriota, el R. P. Pedro de Brizuela, le ha dispensado apoyo y hospitalidad. De esperar es que los resultados de esta expedicidn, empren- dida con tanto celo y entusiasmo por los Sres. Martinez Esca- lera, correspondan a la actividad é inteligencia de los viajeros que la llevan 4 cabo; pero es al mismo tiempo de lamentar que nuestro Gobierno no les haya facilitado los medios mas indispensables para realizarla y que se hayan de ver obligados 4 abandonar su empresa en la época mas propicia para la re- coleecién por falta de recursos. —E] mismo &r. Bolivar leyo las siguientes «Observaciones acerca de la primera morfosis de la Langosta (Stauronotus maroccanus Thunb.) Son tan inciertas y acusan de tal modo la falta de observa— cidn directa las indicaciones que acerca de este asunto se leen en los autores que se han ocupado en su estudio, que creo no huelgan las siguientes observaciones acerca de la primera morfosis de la langosta. Los insectos & que voy a referirme salieron del canuto ef 13 de Mayo, y procedian de Ciudad-Real. Al abandonar el huevo, los jévenes de la langosta son de color blanquecino algo sonrosado, destacAndose por su color mas obseuro los DE HISTORIA NATURAL. 168 ojos compuestos, la linea arqueada de las rodillas posteriores y la punta de las espinas del mismo par. El cuerpo es prolon- gvado, y aun pudiera decirse vermiforme, semejandose al de una momia, porque todos sus organos estan aplicados unos sobre otros; asi la boca lo esta sobre el pecho, las antenas se hallan colocadas alo largo de la cabeza, como se ve en una de las figuras adjuntas, y las patas aplicadas al cuerpo y dirigi- das hacia atras, excepto las Ultimas tibias que estan en flexién. (Las lineas que hay « los lados indican e| tamano de las larvas.) La cabeza es abultada con grandes ojos, en los que se dis— tingue muy bien con ligero aumento la red formada por la yuxtaposicion de las facetas numerosisimas que forman la cér- nea. Las antenas son mas gruesas hacia el extremo, en el que vuelven a estrecharse, y los tarsos parecen constar de un solo artejo prolongado. La morfosis se verifica inmediatamente de abandonar e] ‘anuto; algunos individuos no han empleado siquiera diez minutos desde la salida hasta la terminacién de la muda, pero no todos se despojan con tanta rapidez y tan felizmente de la cuticula quitinosa, pues algunos han tardado hasta doble tiempo, y no son pocos las que mueren después de reiterados esfuerzos para despojarse de ella, y sin poder conseguirlo- Esto sucede generalmente 4 los que no logran de primera in— tencion retirar las patas posteriores de la funda que las en- vuelve. Es constante que todos los que mueren tienen enre- dada la cuticula entre las patas, mientras que en los que se 164 ACTAS DE LA SOCIEDAD ‘ESPANOLA salvan queda replegada aquella formando una escamita en el extremo del abdomen. Para despojarse de la envoltura de que se trata, el animal abulta todas las partes de su cuerpo sucesivamente, produ- ciendo un movimiento vermicular, 6 sea como el que vemos el un gusano, una lombriz por ejemplo, cuando camina de una parte 4 otra, se acenttia mas el abultamiento en la piel del cuello que en vez de estar escondida debajo del borde anterior del pronoto como en el adulto, se pone aqui a descubierto, y es donde se inicia la hendidura longitudinal que se extiende por la linea media del pronoto y constituye la abertura por la que el insecto saca primeramente la cabeza, y sucesivamente el torax, las patas y el abdomen, a menos de que éste quede antes en libertad, en cuyo caso el animal se ve obligado a hacer esfuerzos extraordinarios para plegar la cuticula y reti- rar de ella las patas revolviéndose en todos sentidos, tomando las posturas mas inverosimiles, estirandose, encogiéndose, con- torneando el cuerpo en todos sentidos para obligar a la cuti- cula 4 que vaya recogiéndose hacia el extremo de las patas, donde como he dicho queda muchas veces enredada sin que el animal pueda desembarazarse de ella. A medida que pasa tiempo van coloreandose en rojizo los escudos dorsales de la piel, y cuando la morfosis ha terminado se acelera el obscurecimiento de la coloracién de modo que a las dos 6 tres horas ya es muy intensa ésta; al mismo tiempo se verifica, sin duda, el endurecimiento 6 quitinizacién de la cuticula que aparece debajo, pues 4 los cinco minutos de ha- berse verificado la muda, las larvas ya se valen de sus patas posteriores para saltar, se sostienen sobre las cuatro anterio- res, extienden las antenas, pruebas todas bien claras de que los musculos encuentran puntos resistentes en que fijarse. El insecto después de esta morfosis difiere del adulto como puede observarse por el croquis adjunto, por varias particula- ridades, entre las que Hlaman mas la atencién, la forma del pronoto, que es transverso y truncado por delante y por detras 6 mas bien con el borde posterior escotado; las quillas late- rales arqueadas presentan desde este momento el dibujo ama- rillo earacteristico.» DE HISTORIA NATURAL. 165 SECCION DE SEVILLA. Sesi6n del 29 de Mayo de 1899. PRESIDENCIA DE DON MANUEL DE PAUL. —Se leyo y aprobo el acta de la sesién anterior. -——I] Sr. Mazo presento la siguiente nota: «Casos de albinismo. Entre los muchos ejemplos de albinismo que en las aves de esta regién andaluza he observado, y que son muy frecuen- tes en la Perdia rubra L., Himberiza miliaria L., Alauda arven- sis L. y algunas otras, voy a citar dos ejemplares que tengo por curiosos y que han llegado a mis manos. Uno consiste en un individuo de Fringilla domestica L., en el cual las tintas naturales decrecen gradual y suavemente desde el pico a la cola, tornandose en un blanco grisaceo y algo rojizo que se presenta uniforme en las rémiges primarias y secundarias, y que llega casi al blanco en las rectrices. El otro es un ejemplar de Fringilla carduelis L. que en la base del pico conserva una estreha faja roja, siendo lo que vulgarmente se conoce con el nombre de madvrovo por su color rojo vivo, de un blanco casi puro con algunas plumillas ne- eras; el pecho es blanco con dos manchitas algo mas obscuras i los lados del mismo y dos pintas de un amarillo-brillante junto a ellas; el lomo, hombros. regién caudal (hasta el naci- miento de las rectrices) y el vientre, blancos, conservando en lo demas los tonos naturales. Este ejemplar es interesante, principalmente por la trans- formacién del color pardo rojizo de las dos manchas laterales de la regién pectoral, en un amarillo brillante, segun consta en la descripcién de la especie. —Se did lectura 4 la siguiente nota remitida por el Sr. Barras: 186 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA «Datos para la florula sevillanca. fam. Esecrofulariaceas. (Continuaci6n.) Linavia Elatine Dest.—sevilla.» — spartea Hottm. et Lk.?—Idem. — lanigera Desf.—Sevilla; Vega de Triana, en Campogas. — spartea Hoffm.—Alcala de Guadaira; Dehesa de Gascon, Marchena. — viscosa Dum.—Alcala de Guadaira. — «amethystea Hotfm. et Lk.—Dos Hermanas. — — var. albiflora Boiss. —De Dos Hermanas a Sevilla (Pau!); Dehesa de Gascon, Marchena. Chenorrhinum minus L. Lge.— Almonte. — villosum Lee.— Alcala de Guadaira; Dehesa de Gascon, Marchena. — var. granalensis Bourg.—Alcala de Guadaira. Odontites lutea (L.) Rehb.—Sevilla. Trizago apula Stey. var. lutea Wk.—Idem. — — var. versicolor Willd.—De Dos Hermanas a Sevilla (Pau!). Bufragia latifolia (L.) Griseb.—Sevilla. — viscosa Benth.—De Dos Hermanas 4 Sevilla (Pau!); Al- monte. Fam. Acantaceas. Acanthus mollis L.—Sevilla; Aleala de Guadaira. Fam. Labiadas. Mentha sativa L.—Sevilla. — Pulegium L.—Sevilla; Mairena del Aleor; Alcala de Gua- daira; Penaflor; Camas. — viridis L.—Vega de Triana. — sylvestris L.—EI Pedroso de la Sierra. — rotundifolia L.—Sevilla; San Juan de Aznalfarache. — officinalis L.—Sevilla. Nalvia Sclarea L. (Salvia romana.)—Alcala de Guadaira; De- hesa de Gascon, Marchena. — argentea \..—Gelves. DE HISTORIA NATURAL. 167 Salvia viridis L.—Alcala de Guadaira; de Dos Hermanas a Se- villa (Pau!). — Verbenaca L.—Sevilla; Dehesa de Gascon, Marchena; San Juan de Aznalfarache; Ruinas de Itdlica. — var. precor?—Sevilla. — oblongata Vahl.—De Dos Hermanas a Sevilla (Pau!). — verbenacoides Brot.—Idem. — Horminum L.—Sevilla. (Cult.) Rosmarinus officinalis L.— Sevilla; Montellano; Mairena del Alcor; Almonte, Lavandula Stechas DC.— Alcala de Guadaira; Hornachuelos;: Almonte. ' — pedunculata Cay.— Alcala de Guadaira. — wmultifida V..—Sevilla. Ocimum Basilicum L.—Idem. Thymus vulgaris L.—Alcala de Guadaira, Moron. — Zygis L.—Sevilla. — Mastichina L.—Dos Hermanas. Coridothymus capitatus Rehb.—Sevilla; Alcala de Guadaira; Dehesa de Gascon, Marchena. Origanum Majorana L.— Sevilla. Satureja montana L.—Penafior; Kl Pedroso de la Sierra. — hortensis L.— Almonte. Melissa officinalis L.—Sevilla. Calamintha Nepeta Hottm.—! Pedroso de la Sierra. — Clinopodium Benth.—Cazalla. Nepeta Nepetella Koch.—Gelves. — tuberosa L.— Alcala de Guadaira; Dehesa de Gascon, Marchena;: Almonte. Stachys Germanica L.—Almonte. — arvensis L.—Sevilla; Dehesa de Gascon, Marchena; Vega de Triana (Pau!); Almonte. — annua L.— Almonte. — hirta L.—Sevilla: Alcala de Guadaira; de Dos Herma- nas a Sevilla (Pau!); Vega de Triana (Pau!). — recta L.—Sevilla. Betonica hirsuta L.—Al\monte. Lamium amplexicaule L..—Sevilla; Aleala de Guadaira (Pail! ); Constantina (Medina!); Cortijo de Tercia; Ruinas de Italica, Moron. 168 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Lamium album L.—Aleala de Guadaira (Patl!). Ballota hirsuta Benth.—Aleala de Guadaira; Alcala del Rio: Dehesa de Gascon, Marchena. Phlomis Lychnitis L.—Utrera. — purpurea L.—Sevilla; Alcala de Guadaira, Cazalla. Marrubium vulgare L.—Sevilla; Huévar (Paul!). Sideritis Romana \..—Dehesa de Quintos; Alcala de Guadaira; Dehesa de Gascon, Marchena: Keija. — scordioides L.—Cerros de Quintos. Cleonia Lusitanica L.—Sevilla; Alcala de Guadaira; Dehesa de Gascon, Marchena; Lebrija. Teucrium Pseudochamepytis L.—Sevilla; Dehesa de Gascon, Marchena. — spinosum \..—Sevilla. — fiavum ..—Constantina, Cazalla. — Polium 1..—Sevilla. — capitatum L.—Alcala de Guadaira; Dehesa de Gascon, Marchena; Almonte. Fam. Verbenaceas. Verbena officinalis L.—Sevilla; Aleala de Guadaira; Vega de Triana; Moron. — supina L..—Sevilla; Vega de Triana. Alloysia citroidora Ort.—Sevilla. (Cult.) Fam. Plantaginaceas. Plantago Psillium .—Sevilla; de Dos Hermanas 4 Sevilla (Pau!); Almonte. — arenaria Valdst.— Alcala de Guadaira, Penaflor. — amplexicaulis Cav.—Alcala de Guadaira; Dehesa de Gas- con, Marchena. — major L.—Sevilla. — Lagopus L.—Alcala de Guadaira, Penaflor. — montana Lamk.—Almonte. — albicans L.—Alecala de Guadaira; Dehesa de Gascon. Marchena. — Coronopus L..—Sevilla, Moron. — serraria L..—De Dos Hermanas a Sevilla (Pau!).» DE HISTORIA NATURAL, 16 SECCION DE ZARAGOZA. Sesi6én del 31 de Mayo de 1899. PRESIDENCIA DE DON JOSE A. DOSSET. —Se leyé y aprobé el acta de la sesién anterior. —Se hizo una propuesta de socio de numero. —El Sr. Gila did cuenta de una sesién extraordinaria cele— brada el 17 de Mayo, en la que el Sr. Dosset did a conocer sus especiales trabajos sobre diatomeas, mostrando los hermosos ejemplares de su numerosa coleccion. —E] Sr. Pardo presenté el catalogo.de plantas de Torrecilla de Aleaniz y de Valdealgorfa (Teruel), y se acordé que pasaré a la Comision de publicacion. —KEIR. P. Navas did lectura a la siguiente nota: «Una excursion al Montsant () (provincia de Tarragona). Notas geologicas. Inclinacion de los estratos. Toda la sierra del Montsant es de formacién miocena lacustre inferior. Sus estratos se pre- sentan dondequiera casi perfectamente horizontales, asi en la masa central como en las estribaciones extremas, segun puede verse en la sierra llamada de la Pineda, que divide el rio Mont- sant del arroyo de Cabacés. ‘rt = LES oe = bo mi is ore & a ar, sj 2 x4 i paw 205, = a (Tomala de fotografia.) Sin embargo, en las cercanias de este Ultimo pueblo estar en algunos sitios los estratos calizos tan notablemente incli- (1) Veanse las 4ctas de este ano, paginas 15 y 76. 170 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA nados, que a veces alcanzan la posiciOn vertical. En la fig. 1." se distinguen las rocas del fondo en a verticales, mientras que las mas salientes en / conservan su horizontalidad normal, Kn el sitio llamado La Foya son verticales los mismos estratos ealizos en a, presentando oblicuidad marcada los siguientes en degradacién sucesiva hasta la horizontal. La explicacién de semejante fendmeno parece ser la exis— tencia de una doble falla a lo largo de las canadas que divide la sierra llamada de Las Canales, en cuyas dos vertientes se presentan las rocas en hiladas casi verticales. Merced a estas fallas, al hundirse el suelo tornaronse los estratos, de horizon- tales que eran, en verticales, y por un movimiento de eleva- cién consiguiente los estratos inmediatos que sufrieron mas el empuje se inclinaron, extendiéndose el fendmeno a la dis- tancia horizontal de poco menos de 1 km. El siguiente corte da alguna idea de lo dicho, a la vez que presenta la estratificacidn normal del mioceno en aquella re- 2ion. Mig \ My cl ‘2 -baoe Corte del mioceno lacustre al N. de Cabacés (Tarragona). 1. Capas delgadas de lignito margoso. ‘ é ml. Mioceno lacustre. 2. Arcilla en roca compacta. Alternando con E SJ J'. Fallas 3. Molasa. margas. Pro - . ts. Tridsico superior (1). 4. Conglomerado calizo. Indicios de que existen las citadas fallas son las cavidades subterraneas de que brotan fuentes caudalosas al pie de los estratos verticales, las simas (avénchs en el pais) y un hoyo . (1) Tomo esta palabra en la acepcién en que la emplea el Sr. Mallada, Stnopsis pa- deontologica de Espaja, tomoi1, pag. 1, esto es, como comprensivo del muscheltkalk y del keuper. DE HISTORIA NATURAL. 171 longitudinal Hamado ¢rinqguetle (joch de pilota) que se ve a unos 300 m. KE. de la ermita de La Foya en // (fig. 2.*), abierto entre los estratos verticales de conglomerado calizo que se elevan a4 mas de 10 m. y que mide mas de 50 m. de longitud por unos 3 de anchura, rellenado en talud a sus dos extremos por los de- rrubios de las tierras que se han desprendido de lo alto. Piedras caballeras. Son varias y de formas muy diversas las que se observan en el término de Cabacés, debidas no sdlo al levantamiento de estratos que acabo de indicar, sino tam- bién a los fendmenos subsiguientes de arrastre de los materia- les terrosos por las aguas y denudacién por otros agentes atmosféricos. Entre ellas citaré las llamadas gigantes en el pais por su forma extrana (figuras 3." y 4.”). PiGreos: g = vive i Toe EN Say Vee Wi eto . tll wah, we, ae = i es ade ha I cae se . - “had nO ne INS NS TELS. > aR as Se » El Ebro del periodo mioceno. Vor el lado del Mediodia de Cabacés, y en los ultimos confines del mioceno lacustre, se 172 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA encuentran algunos fosiles evidentemente marinos y pertene- cientes al terreno cretaceo. Entre los varios recogidos figuran algunos Ammonites y Tylostoma, moldes de Pecten, etc., todos en muy mal estado de conservacion y con indicios manifiestos de haber sufrido el acarreo, presentandose los Ammonites con las costillas y tubérculos borrados y un molde de Pecfen en un canto de caliza rodado por una cara. ~COmo se explica seme- jante fendmeno, pues el terreno inmediato es tridsico, y el cre- taceo no se encuentra en muchas leg@uas 4 la redonda? Hallan- dose los fésiles en el mioceno acarreados desde el cretaceo, no pudo verificarse el transporte en edades posteriores, por impe- dirlo los montes que en el sitio ahora se levantan. Resta, pues. la hipdtesis que formulo de acuerdo con el distinguido geo- logo Sr. Mallada, por mi consultado a la vista de los ejempla— res, conviene saber, que el acarreo se verificase en la misma época miocena. Durante ella existia un extenso lago en la cuenca del Ebro, cuyos confines meridionales corrian por los términos de los pueblos La Figuera y La Torre. Verificése el arrastre mediante un rio que descendiese de los montes de Tortosa 6 Beceite, de donde proceden los fdsiles, rio que seguia una direccién préximamente igual y opuesta a la que actual- mente lleva el Ebro a partir de Ascé 6 Mora de Ebro. Y hé aqui que asistimos 4 las escenas que se verificaron en las riberas del gran lago del Ebro; y los fésiles hallados nos hacen venir al descubrimiento de un rio que entonces existia. Pero gqué rio era ese? El Lbro inferior i otro analogo que al lago abo— caba por la parte meridional, ademas del Ebro superior que DE HISTORIA :NATURAL. 173 de Aragon descendia. Pero colmado el lago, el Ebro superior salvo el valle y se encamino al mar. Tanto nos dice la inspec— cidn de unos fdsiles indeterminables especificamente. La Cueva Santa. Finalmente haré breves indicaciones sobre la caverna llamada en el pais Cova Santa, sita en el término municipal de La Morera, en el mioceno lacustre del Montsant, no lejos de la cumbre de la sierra. Las exageradas y fabulosas relaciones que de ella oia me impulsaron a visitarla, no por- que esperase hallar en su interior mucho digno de estudio, sino para dejar la verdad en su lugar. Hs una gran cavidad subterranea, midiendo longitud total de unos 86 m. por una rama y 100 por otra. Comienza en un suave descenso que a trechos se ensancha hasta llegar a lo que Namo vestibulo (fig. 5.°, num. 1), donde se levanta 4 un lado una estalagmita cénica de unos 2 m. de altura por 1 m. de diametro en la base, y conocida de los visi- tantes porque golpeandola con una piedra da un sonido algo metalico, lo cual le ha valido el nombre de campana (num. 2). Desde el vestibulo se baja por un da/con (nim. 3) a un corre- dor lateral que esta en un plano 2 m. inferior al del vestibulo y presenta varias ramificaciones angostas y cortos anchuro- nes. En un extremo se bifurca: la rama derecha por unos es- calones va a parar a una puerta (nim. 4) que se abre en una gran sala 6 salon (nim. 5), que pudiéramos llamar templo por sus dimensiones y por lo abovedado del techo, aunque la altu- ra no aleanza sino 46 67m. Se le ha llamado ce//er 6 bodega por algunos visitantes (1). Este salon tiene otro pasadizo ascen- dente (nim. 6) que por una ventana (num. 7) comunica con el corredor lateral, y finalmente dos pasos, 6 llamense minas (numeros 8 y 8’), por la poca elevacién del techo, apenas supe- rior 4 1 m. Estos viaductos estan en diferentes planos a poca distancia el uno del otro (2 m. escasos), y mediante ellos, como por puerta excusada, el saldn comunica con el vestibulo. Volviendo ahora al ramal frontero del corredor lateral que hemos dejado (nim. 9), por un pasadizo estrecho (num. 10), llegamos al /agar (num. 11), especie de cono de 4,5 m. de pro- (1) Véase Cavernas y simas de Espaiia, por D. Gabriel Puig y Larraz. « Boletin de la Comisién del Mapa geolégico de Espana», tomo xxr, pag. 398 (ano 1891). a ueva Santa. M meee (Taran cons ‘ ar | >t . \ DE HISTORIA NATURAL. 175 fundidad por 6 de ancho, en uno de cuyos lados puede verse una pileta (niimeros 12 y 12' p) excavada naturalmente en la misma pena, y de figura tan simétrica, que parece labrada artificialmente. En la pared izquierda del lagar se han practi- cado escalones para el descenso. Del lagar, por la parte opues- ta A la entrada, parten dos ca//ejones sin salida 6 escondidos (nimeros 13 y 14), que dan fin a la cueva por aquella parte. El techo de la gruta esta cuajado de pequenas estalactitas, pero dicese las habia mucho mayores antiguamente. Alguna que otra se ve en sitios determinados, de regular dimensién. Toda la cueva esta feamente ennegrecida por el humo de las teas con que se alumbran los muchos curiosos que la visitan. En resumen, la citada caverna ofrece no poco que ver al curioso, pero casi nada al naturalista, ano ser que se hallasen en ella articulados cavernicolas, lo cual no he podido com- probar. Para terminar esta nota pondré la lista de los ejemplares de rocas recogidas y que caracterizan los terrenos del Montsant y sus estribaciones del término municipal de Cabaces. Piso inferior, en la base de las sierras y serrijones. Lignito margoso fosilifero. Descubierto por el arroyo de Caba- cés, junto a este pueblo. Arcilla roja compacta, llamada /apds en el pais. Piso medio, en las laderas. Molasa roja en capas delgadas, deleznable. — — con motitas espaticas. — amarillenta de grano fino. — -— de grano mediano. Piso superior, en las cumbres. Conglomerado calizo de grano pequeno, del tamano de gui- santes y menor. — de componentes medianos. — — de cantos rodados grandes, hasta de 1 dm. de lon- gitud, 176 ACTAS DE LA SOCTEDAD ESPANOLA Gonfolita. Rocas de la cumbre. . Caliza compacta. En grietas verticales del conglomerado. Silex blanco lechoso. En cantos sueltos y en el conglomerado calizo. — — opalino. — rosaceo. — amarillento con faja irisada. — rojo de color de carne magra. — calizo. Kspato calizo. } Hierro piritoso. } Limonita. En nddulos sueltos y diseminados, etc. Un filoncillo que se ha pretendido explotar. Nota adicional. Siendo tan afines 4 primera vista las dos especies Mphippiger Orlegai Pautel y Hph. Panteli Navas (1), me ha parecido opor- tuno hacer notar sus principales diferencias, acompanando algunas figuras. Debo el dibujo de la placa subanal de la ° del Eph. Ortega ala amabilidad del P. Pantel, quien se ha dig- nado enviarmelo para este objeto. 1.“ El pronoto es sin quilla en el Hphippiger Ortegai, y en el Hph. Panteli presenta un vestigio de ella en la parte pos- terior en la 9; los Angulos posteriores de los lobulos laterales son mas redondeados, 6 sea en arco mas cerrado en el Lphip- piger Panteli. 2." Las espinas inferiores de los fémures posteriores son insignificantes y como tuberculiformes en el Lph. Panteli. : 3." La coloracién en esta especie presenta un hermoso tinte eveneral de castano brillante, tirando 4 morado en el £ph. O7- legat. 4.°. Los apéndices abdominales son muy distintos en ambas especies. Los cercos del & del Hph. Panteli al encogerse ocul- tan completamente el diente interno (fig. 6."), el cual es enor- me, como se ve en la fig. 7.°, siendo como triangular y la punta de los mismos cercos, bien diferente que en el Hph. Pan- 1) Véanse las Actas de Enero, pag, 46. DE HISTORIA NATURAL. 177 teu. (Véase el tomo xxv de los ANALES, lam. 1.°, fig. 4.°, ano 1896.) La placa subanal de la 9 del ph. Panteli es para— Fig. 6.4 Fig. 7.4 sqgs i iinet NUL eT 4 Ways! Aa q lelogramica, terminada posteriormente en un seno redondea- do (fig. 8."), siendo subpentagonal y uniforme en el Hph. Or- tegai Pantel (fig. 9.*).» —EI] Sr. Moyano (D. Pedro) dio lectura a las siguientes «Notas etnologicas sobre el ganado espanol. ne Razas caballares espafiolas. Kl ganado caballay en Espana ofrécese muy heterogéneo en su morfologia, debido a los multiples é inconscientes cruza- mientos realizados con diferentes razas. Sin embargo, aun puede distinguirse en algunas de nuestras comarcas gran nit- mero de individuos con caracteres comunes, formando colec— tividades étnicas diferentes. Aunque todas ellas se vienen de- signando con el nombre de caballo espanol, facilmente se aprecia, por el examen de las mismas, que son varias las ra- zas de caballos que en nuestro pais existen. ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.— JUNIO, 1899. 12 178 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA En este trabajo preliminar vamos 4 ocuparnos de las estu- diadas por nosotros. Raza andaluza 6 bética (1). (Equus caballus beticus). Sinonimia. —Stirps Hispanicus (Andalusius nobilis).— Des- marest.— (2) Variedad andaluza.— Sanson (3) y caballo espa- nol (varios autores). Caracteres étnicos morfoldgicos.—-E\ caballo de raza andaluza es de mediana corpulencia entre los de la especie, y en su con- formacién dominan los perfiles convexos, resultando de todo su conjunto el mas esbelto y arrogante de todos los caballos que se conocen al verificar sus marchas. (1) Para esta descripcidn nos hemos servido de caballos de pura raza, pertene- cientes Ala «Seccién de Sementales,» instalada en Zaragoza, parada particular, Regi miento del Rey y de Castillejos, y de esqueletos de la Escuela de Veterinaria. (2) Fauna mastodolégica ibérica, del Excmo. Sr. D. Mariano de la Paz Graells. 43) Traité de Zootechnie. DE HISTORIA NATURAL. 179 Tallapmedia....c55. . coer ser an 2,00 cI Perimetro;toracico... case 6 Longitud del tronco...c. sees, 1,600 Peso.medio: ell ViV0:. eae OOO Ke: La pie/ es delgada y flexible, capa frecuentemente torda 6 castana, con pelo fino y bien sentado. La cabeza es relativa- mente grande y el perfil de la cara con ligera convexidad, que se extiende desde su origen hasta el final del labio superior, terminando en forma de chaflan (1). Las orejas son pequefias, bien separadas, bajas en su nacimiento y con escotadura muy pronunciada en el borde interno; la frente es plana y espacio- sa, las Orbitas salientes, ojos expresivos, apofisis cigomaticas bien manifiestas, supranasales estrechos, narices poco. dila- tadas, carrillos delgados y labios gruesos, algo débil el infe- rior, pareciendo los individuos ligeramente belfos. Susindice cetalico total-es: i. 25 aeons oe 38 » PUCTAL cade ce. 2 Ae Me eee gene ae ts Bil » TAG ont: Bers weaves eeReat tien tons 5 ee Cuello musculoso, borde superior convexo en el centro, con gran cerviz, pudiéndose peinar sus crines que son finas y se- dosas. La unidn del cuello con el tronco ofrece una base muy ancha. El ¢ronco es bien proporcionado, cruz alta y descarnada; dorso débilmente ensillado, lomos anchos y flexibles, grupa redonda y nacimiento de la cola bajo, cuyo érgano esta bien poblado de cerdas larguisimas; el pecho es amplio, planos costales bien arqueados, y vientre voluminoso. En las extremidades anteriores, las espaldas son largas y muy oblicuas, brazo y antebrazo cortos y musculosos; rodillas altas y anchas; canas y cuartillas algo largas, y cascos peque- nos y compactos. En las posteriores, la cadera y muslo son muy carnosos, pierna estrecha, tarsos reducidos y acodados, canas cilindricas, tendones poco salientes y débiles, y menu- dillos pequenios. Caracteres ¢tnicos fisiologicos.—Los individuos pertenecientes a la raza andaluza son de complexion robusta, sobrios y rusti- cos, muy enérgicos y resistentes; pero de desarrollo lento. Su (1) Muchos caballos ofrecen en la cara perfil recto, sin duda por ser oriundos de estirpe drabe, asi como los que le ofrecen convexo—que son los mis,—es resultante de la influencia dejada por la raza germanica. 1£0 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA sistema dseo es muy compacto. Gozan de gran potencia diges- tiva, y su temperamento es marcadamente sanguineo. Son, ademas, muy inteligentes, déciles y mansos. Por sus aptitu- les fisioldgico-mecanicas, resultan caballos excelentes para el paseo 6 de silla. Caracteres étnicos patologicos.—Hasta la fecha, se descono- cen. Las enfermedades mas frecuentes en los individuos de esta raza son las del aparato digestivo, debido a la alimenta- cién de que hacen uso desde su mas tierna edad, consistente en hierba fresca 6 henificada, lo cual origina la gran dilata- cién de las visceras que forman el referido aparato. Subraza marismena.—Los caballos que forman esta colecti- vidad étnica, ofrecen los caracteres de la raza bética; pero se les distingue por la mayor corpulencia de su totalidad. Su talla media alcanza de 1,66 4 1,68 m.; la piel es mas gruesa, pelo largo y cascos grandes y estoposos. Subraza rondena.—Esta colectividad étnica la forman caba- llos de menor talla, oriundos de los sitios montanosos de la regién bética, siendo los mas famosos los que se produ- cen en la serrania de Ronda. Los perfiles 6 contornos morfo- ldgicos, son también los mismos que los de la raza andaluza; pero las dimensiones generales, son mas reducidas. Su talla media oscila de 1,46 4 1,52 m. Condiciones del medio donde se produce la raza. vi, Naturaleza del terreno.—Esta comprendida en los sistemas miocénico y aluvial. Configuracion del terreno.—Los grandes valles del Guadal- quivir y Guadiana, y elevadas montanas, junto con extensas campinas. Clima dominante.—Calido y seco. Regimen alimenticio.—Los individuos de la raza andaluza, se crian siguiendo el sistema de pastoreo mixto, en la mayor parte de la regidn; siendo la base del alimento plantas grami- leas pratenses. Area topogrdfica.—¥\ centro de produccién de caballos de la referida raza radica en Andalucia y se extiende por Extrema- dura y limites de Castilla la Nueva; pero el prototipo del ca- ballo de raza andaluza, se encuentra en las campitias de las provincias de Cadiz y Sevilla, principalmente en Jerez y Ar- DE HISTORIA NATURAL, 18] cos de la Frontera, y en Medina Sidonia. También son nota- bles los que se producen en Cordoba y su provincia. Raza vasco-navarra (1). Ckquus caballus vascus.) Sinonimia.—Var-edad navarra (Sanson) y caballo navarro (varios autores). Caracteres elnicos morfologicos.—Los individuos pertenecien- tes 4 la raza vasco-navarra son todos de pequena corpulencia, proporciones generales reducidas y de perfiles rectos y con- VeXos. Wa wImedia., cies le ctatenese! DOOM Perimetro TOLACiCO «sya ce dient ben. By AU boncitud, del trouco, ..4.,. 4: dene eeh leo Peso MeCdiO EN-ViVOnmpasenies, cle ko: La piel es gruesa, bien tupida de pelo negro 6 castano. La cabeza pequena, de forma cuadrada y perfil de la cara recto. Las orejas son pequenias, oidos y vista bien ejercitados, frente (1) Estudiada en su centro de proluccioén. 182 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA plana, drbitas poco salientes, apdfisis cigomaticas pronuncia— das, supranasales rectos, nariz ancha, carrillos planos y labios gruesos. imaice cefalico totals Toke ane eee & «6 facignlvacnms +>» «nate teen D ASO] Bawnlocs.s.. «te eeeien eee El evello es musculoso y corto, bien unido a la cabeza. Tron- co recogido, dorso y lomo rectos, pecho espacioso, costillares arqueados, vientre pequeno, grupa ligeramente oblicua y maslo de la cola bien poblado de cerdas gruesas y asperas. Las extremidades anteriores estan bien aplomadas, son fuer- tes y robustas; las posteriores se dirigen algo hacia adelante y cerradas de tarsos; los radios superiores relativamente son largos y su direccién muy oblicua; los inferiores cortos y rec— tos; las articulaciones amplias, largas cernejas y cascos pe~ quenos, pero compactos y resistentes. Caracteres étnicos fisiologicos.— Los caballos pertenecientes i la raza vasco-navarra son notables por su robustez y exce— lente complexién, por su agilidad y resistencia, por su sobrie- dad y rusticidad; su desarrollo es lento y de temperamento sanguineo; muy inteligentes y ddciles, y por su conformacién reunen condiciones fisioldgico-mecanicas mixtas, de carga y de tiro. Caracteres étnico-patologicos.—Desconocidos. Condiciones del medio donde se produce la raza. Naturaleza del terveno.— Pertenece a los sistemas cretaceo y eocénico, dominando como elementos litoldgicos las arcillas, arena, caliza, cuarzos y margas. Configuracién. —Montanhoso en su mayor parte. También existen algunos valles y riberas. Clima dominante.—Frio y hiimedo en las Provincias Vascon- gadas y frio y seco en Navarra. Regimen alimenticio.—Los individuos de la raza vasco-nava- rra se producen en libertad, 6 sea siguiendo el sistema de pastoreo puro. Area lopogrdfica.—l centro étnico principal de produccién comprende toda Navarra, con preferencia en el valle de Aye- cena, entre Burguete y Roncesvalles. Se extiende también por toda la parte montanosa de las Provincias Vascas, senalada— DE HISTORIA NATURAL. 183 mente en Vizcaya, en los partidos de Durango, Guernica y Valmaseda, donde se crian en gran niimero.» —KE]l Sr. Vicioso, de Calatayud, leyé las siguientes notas sobre « Liquenes de Calatayud. ii Al presentar un catalogo, siquiera incompleto, de los lique- nes de Calatayud y sus inmediaciones, debo advertir que me ha tenido no poco perplejo la eleccidn de clasificacién , espe— cialmente en la denominacién de géneros y especies. Si bien la determinacién de los liquenes foliaceos y fruticulosos se presta & menos dificultades, no sucede asi con los crustaceos, a los cuales pertenecen la mayor parte de los que en Calata- yud se encuentran, por ser saxicolas. Los mismos autores que se han ocupado en el estudio de estas modestas plantas han exagerado las dificultades, en vez de allanarlas, con sus tan variados sistemas de clasificacion; y si confusién hay algunas veces respecto a los sindnimos de algunas fanerdgamas, ésta sube de punto cuando de liquenes se trata. Los liquendlogos antiguos fundaron sus sistemas de clasi- ticacidn en caracteres exteriores. Es sabido que De Candolle publicé la suya 4 principios de siglo utilizando los trabajos de Tournefort, Micheli y Linneo, que consideraban a los liquenes como un solo género; Hill (1751) y Adamson (1763) hicieron la primera distincién de géneros; Hoffmann solo utilizé los ca- racteres sacados del talo, mientras que Persoon y Schrader fundaron su sistema en la forma del talo en combinacién con los caracteres de la fructificacién, estableciendo asi las verda- deras bases de la clasificacién liquenoldgica. A los caracteres exteriores recurrieron también Fries y Scherer con muy juicioso criterio; y sin emplear el microsco— pio, sdlo con el estudio de la estructura externa, llegaron a las conclusiones admitidas por la ciencia moderna en conso— nancia con las revelaciones de la micrografia. Adviértase de paso que los sabios ahora citados se sirvieron de dichos carac- teres exteriores, no como De Candolle para definir las especies, sino para demarcar con exactitud los limites de los géneros. Entre los sistemas modernos fundados en el estudio micros- cépico de los elementos hallanse los de Nageli, que dedujo sus e@éneros de los caracteres de las esporas; de Nylander, que es- 184 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA tableciéd sus grandes divisiones sobre la consideracién de las relaciones de las capas del talo, y de Th. Fries, cuyos ordenes se basan en la forma de los gonidios. En el estudio y determinacién de los iquenes pueden dis- tinguirse tres épocas: 1.", Fanerologica (época de Linneo, Hoffmann, Acharius, etc.), en la que las especies se distin- guen casi tinicamente por sus caracteres exteriores; 2.", His- lologica (época de Keerber, Massalongo, Nylander, etc.); la determinacidn y clasificacidn de las especies se funda princi- palmente en la estructura anatomica del talo, apotecios y es- permacios; y 3.", Quimica (época de Nylander iz Flora Ratis- bonensi, Th. M. Fries; Lamy de la Chapelle, etc.), en la que se hace un uso casi diario de los reactivos quimicos para de- terminar los liquenes. Finalmente, la gran preocupacién actual de los clasificado- res parece ser el establecer una serie lineal de familias que procedan directamente unas de otras; de donde ha de resultar necesariamente que las analogias sean forzadas para un gran numero de ellas. istudiados los iquenes bajo tan diferentes puntos de vista, no es de extrahar que la mayor parte de ellos tenga a lo menos cuatro 6 mas nombres; y menos mal si al cambiar de género les han conservado el nombre especifico primitivo. Ista suerte ha tenido, por ejemplo, el Lichen ciliaris L., que es Physcia ciliaris para De Candolle, Borrera para Acharius, Parmelia para Fries y Anaplychia para Kerber. No sucede lo mismo con algunas Caloplacas, que casi figu- ran en tantos géneros como autores las han descrito, perdiendo en el cambio hasta su nombre especifico. La C. citvina Th. Fr. figura con los nombres de Vulneraria citrina Hftm., Patellaria candelaria DC., Parmelia parietina var. citrinella i. Fries, Par- melia murorum var. citrina Desp., Placodium citrinum Nyl., Callopisma citrinum Krb., Lecanora phlogina Ny\., Lichen, Par- melia y Lecanora citrina Ach. Esa misma divergencia de criterios produce otra confusion 10 menos embarazosa: la de considerar unos como especies lo que para otros no son mas que variedades 6 simples formas. La Usnea barbata L., la Ramalina calicaris L., algunas Clado- nias, la Lecanora subfusca L. y la Lecidea eleochroma Ach., es- tas dos iltimas sobre todo, presentan tal numero de varieda- DE HISTORIA NATURAL. 185 des y formas, que no hay Ariadna bastante habil para dar con la salida de tan intrincado laberinto. Y si ejemplares de una misma variedad se remiten a distintos autores, se puede ase- gurar, sin temor de equivocarse, que no siempre coincidiran en aplicarles el mismo nombre; y hasta podra suceder que, enviada en distintas ocasiones 4 un mismo autor, llame varie- dad argentata a la que anteriormente habia tomado por varie- dad cotlocarpa de la Lecanora subsusca, y habra también quien llame Zecanora rugosa a la que para otros no es mas que una | forma de la var. ch/arona 6 var. distans de la misma Lecanora. En cambio algunos elevan a la categoria de especie a la va- riedad versicolor de la Sg. saxicola Poll., la cual, con ampliar un poco la definicidn del tipo, cabria perfectamente en él, pues a cada paso he visto formas intermedias en las que el color verde claro del talo va desapareciendo poco 4 poco hasta convertirse en blanco, que es lo que distingue a la variedad apuntada. No es ésta ocasién ni estoy-en condiciones de poder discutir los diferentes sistemas de clasificacién de los iquenes, porque creo que en esta sencilla enumeracidn es indiferente que con- sidere al género Bvell/ia, por ejemplo, como bueno, porque sus especies tienen las esporas divididas por uno, dos, tres tabi- aues, y hasta se presentan murales, 6 tan sdlo como un sub- género del Zecidea, por tener sus apotecios lecidineos. A veces se han fundado g@éneros en caracteres mas dificiles de apre- ciar, el Rhizocarpon, por ejemplo, cuyo caracter diferencial consiste en una ligera membrana que envuelve la espora, y cuya presencia no es facil observar en muchas especies. En la imposibilidad de seguir 4 un autor determinado y atenerme a su clasificacién, por no existir una obra de carac- ter general que contenga las descripciones de todos los lique- nes del siguiente catalogo, he creido lo mas acertado seguir paso a paso la obrita de Mr. Boistel para todos los Hquenes que estén descritos en ella, y conservar el nombre que me ha sido dado por otros liquendlogos a quienes consulté en mis dudas. Todos los liquenes que enumero proceden de las inmedia- ciones de Calatayud y de los términos denominados Anchis, Ribota, Villalbilla y Campiel, Ultimas estribaciones de la sie- rra de Vicort. He citado aqui las anteriores localidades con objeto de no repetirlas a cada paso, haciendo constar tan sdlo la de aquellos que la tengan diferente. 186 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Il. Enumeracion de los liquenes de Calatayud. Cladoniaceos. Cladonia rangiformis Hoffm. var. puagens Ach. — _ — -— f." foliosa. Podecios cubiertos de escamitas talinas. Colinas al pie de las ruinas de Bilbilis. — furcata Ach. var. palamea Ach. f.* crispatella Flork. — Rara y vista tan sdlo en Anchis. — pyxidata Ach. — — var. prolifera Del.—Solamente en Campiel. — — var. pocillum Ach. f.* phyllocephala Scher. Podecios cubiertos de hojuelas. A orillas del Ribota y sobre la tierra de las hendiduras de las rocas. — endiviefolia Dicks. — Abundantisima, lo mismo en el terciario que en el siltirico. Ramalinaceos. Rkamalina polymorpha Ach. — pollinaria Ach. var. humilis Ach.— Ambas saxicolas y estériles. Evernia prunastri Ach. var. munda Scher. — — var. soredifera Scher. — furfuracea Ach. var. ericetorum.— Pinos de Orera. Peltigeraceos. Peltigera rufescens Scheer.—Frecuente, pero rara vez fructifica. Parmeliaceos. Parmelia titiacea Ach. var. scortea Ach. — caperata Ach. — conspersa DC. — — var. stenophylla Ach. — — var. isidiosa Nyl. — proliza Ach.—Saxicola. — isidiotyla Ny\.—Idem. DE HISTORIA NATURAL. 187 Fisciaceos. Anaptychia ciliaris Ach.—Corticola. — — var. crinalis.—Saxicola. Physcia pulverulenta Ach. — — var. argyphea. — Jleptalea Ach. var. tenella Ach.—Corticola. — «aipolia Ach.—Idem. — — var. cercidia.—\dem. — cesia Ach. var. albinea Ny|.—Saxicola. — obscura Scher. var. cycloselis Ach.—Cortezas del nogal. Xanthoria parietinag Ach.—Abundantisima sobre cortezas de toda clase de arboles, en arbustos como el Lyciwm HLuropeum y hasta en las ramitas dela Koniga spinosa. — — var. ectanea Ach.—Sobre rocas; estéril. — — var. chlorina Cheval.— Arboles de lugares himedos y sombrios. No difiere del tipo mas que por el color del talo, y es mas bien una forma que una variedacd propiamente dicha. Lecanoraceos. Pannaria nigra Nyl. Heppia Guepini Ny). — obscurans Ny). Amphiloma lanuginosum DC.—Sobre la tierra de las tapias vie- jas de los huertos. Squamaria lentigera DC.-—Uno de los pocos liquenes que viven sobre la tierra del mioceno (Val de Arenas); raro a orillas del Ribota. — crassa DC.—Muy abundante. — — var. cespitosa Scheer.—Con el tipo y con la S¢. len- ligerda. — sulphurascens Nyl. — saxicola Ach.—AbDundante, lo mismo que sus variedades. — — var. diffracta Ach. — — var. versicolor Ach. Placodium fulgens DC. (*)) — chlorophanum Whinb. (1) Las especies sefaladas con este signo (*) fueron revisadas por Mr. Nylander, 183 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA (*) Placodium chlorophanum var. hilare Dut. (Lecanora hila- ris Duf.) — callopismum Ach. — symphageum Ach. — murorum DC. var. radiatum Huc.— Barranco del Salto. — var. lobulatum Nyl. f.* Anchis. marinum Webb.—Raro en Los liquenes de este grupo desarrollan mayor 6 menor can- tidad de acido crisofanico, segun el sitio en que crecen. Un soporte duro unido 4 un terreno muy soleado dan 4 los ejem- plares una coloracion intensa (de aqui los nombres aurantia- cum, miniatum, cinnabarinum); por el contrario, en los sitios huimedos y sombrios, al pie de las tapias, en las calizas blan- das, el color falta de una manera mas 6 menos completa, apa- reciendo manchas blanquecinas y dando lugar a las formas centroleucum, centrifugum, etc. Unicamente en el borde con- servan, por regla general, el color amarillo anaranjado tipico, de donde se deduce que la coloracién mas 6 menos intensa de un talo no debe utilizarse como caracter especifico, ni siquiera para separar variedades propiamente dichas; podra servir, todo lo mas, para distinguir formas accidentales. Placodium... sp. nov.? an pot. Pl. murorum var. ? Se distingue a4 simple vista de todas las especies de este @é¢- nero por su talo casi negro, compuesto de escamitas amonto- nadas, convexas; confusamente lobulado en el contorno; apo- tecios rojizos con reborde grueso y con color igual al talo; apo- tecios, parafisos, esporas y reaccién quimica como el Pl. mu- rorum. «Vignore quelle cause chimique a pu changer ainsi la couleur du thalle». (Oliv. in litt. ad me.) Yo creo que esta modificacién no puede ser debida 4 una causa quimica, porque junto 4 él vive el P/. murorum con su color tipico (1). que confirmo el nombre de algunas y modificé el de aquellas que lo tenian equivoca- do. Cumplo con gusto el deber de expresarle aqui mi gratitud, asi como 4 los seno- res Boistel y Olivier, que también se han dignado revisar mis muestras y correyir algunos errores. (Esta nota se escribié algan tiempo antes del fallecimiento de Mr. Nylander.) (1) Posteriormente, M. Boistel le ha dado el nombre de Caloplaca ferruginea DC. var. fusco-atra Bayrh (Nyl. Scandinav., p. 143) = var. nigricans Tuck. (Fries, Scan- DE HISTORIA NATURAL. 189 Placodium elegans DC. — circinnatum Pers. — — var. candidans Ny}. — subcircinnatum Ny\.—«Differens sicut sub-species vel forma a circinnata». (Nyl., Lich. Py7. Or., p..17, sub Lecanora.) — teicholytum DC. var. Lallavei Ny}. A pesar de que muchos autores describen como distintos este Placodium y la Caloplaca erythrocarpa, sospeché que se- rian una misma especie, no sdlo porque se encuentran en iguales sitios, sino mas bien por la gran semejanza que ofre- cen sus talos y apotecios. Remitidos con estos nombres y bajo diferentes pliegos para su comprobacién, no desaparecieron mis dudas, pues me fueron devueltas ambas, por un autor como Placodium, y por otro como Caloplaca. Estudiados detenidamente, pude observar que algunos ejem- plares presentaban restos de lobulos, mientras que otros care- cian en absoluto de ellos. Leyendo la descripcién del P/aco- dium en la Flore des Lichens de V Orne por M. Olivier, que dice «Lobes du pourtour... souvent détruits par Page», Hegueé a creer que estas dos especies eran efectivamente una sola, con- siderada como Placodium cuando presenta lobulos, y como Caloplaca cuando carece de ellos. Por otra parte, ambos lique- nes tienen esporas hialinas, polariloculares, elipsoideas, ocho en cada teca, y de dimensiones muy parecidas, algo més an- chas cuando se describe como Ca/loplaca, y se comprende, si se la considera como un estado mas avanzado del Placodium. Por fin mis dudas se desvanecieron del todo leyendo la 2/077 criptogamica del Sr. Amo y Mora, que en la pag. 401 dice asi: «P. (Parmelia) erythrocarpa Fries, Patellaria erythrocarpa Pers., Placodium versicolor DC., Lecanora teicholyta Ach.», ete.: donde se ve que los nombres especificos de aquellos dos lique- nes son aplicados 4 una sola especie; y algunas lineas mas abajo, y en la misma pagina, anade: «var. 3 Lallavei, que es precisamente la de estas inmediaciones. Ademas, Lecanora te/- cholyta es sinénima de Placodium teicholytum DC. y de Par- melia erythrocarpya Ki. Fr., y Patellaria erythrocarpa \o es tam— dinay., p. 184), amadiendo: «Mais a thalle plus glépuleux que dans toutes les des- criptions: peut-étre une forme nouvelle.» 190 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA bién de Caloplaca erythrocarpa Th. Fr.; luego «dos cosas igua- les & una tercera... (1). Caloplaca cerina Krb.—Corticola. — — var. cyanolepra Duby.—Idem. — aurantiaca Krb.—Idem. — pyracea Turn.—Idem. — hematites Chaub.—Cortezas del Craltegus monogyna. Lecanora sulphurea Ach. — cenisea Ach. — albella Ach.—Corticola. — angulosa Ach.—Idem. — glaucoma Ach. — — var. Swartei Ach. — subcarnea Ach, (*)— atra Ach. — variabilis Ach. (*)— Mougeotioides Nyl. (*) — aegopholis Whinb. — subfusca Ach. var. glabrata Ach. — — var. parisiensis Ny|.—Corticola. — — var. argentata Ach.—Idem. — — var. intumescens Krb. f." dispersa.—Idem. — — var. chlarona Ach. f.* rugosa.—idem. — intermutans Nyl. (*) — scotoplaca Ny. Rinodina sophodes Ach. — exigua Ach. — lecanorina Mass. — contribuens Nyl. — confragrosa Ach. Lecania erysibe Ki. Fr. — syringea Ach. Acarospora smaragdula Krb. — glaucocarpa Stiz. — — f.* conspersa Th. Fr. — percenoides Nyl. (1) Al dar 4laimprenta estas cuartillas recibo una nueva obra de M. Olivier, titu- lada Vaposé systématigue et énumération des Lichens de l Ouest et du Nord: Ouest de la France, en la que ya no se cita la Caloplaca erythrocarpa y si el Placodtum teicholytum con los mismos sindnimos de la obra del Sr. Amo y Mora. | DE HISTORIA NATURAL. 191 Acarospora discreta Th. Fries. Aspicilia cinerea Ach. = gibbosa Ach. calcarea Ach. — var. cesioalba Duby. — var. cecula Ach. — var. farinacea Fk. — var. contorli. — f.* conereta. Hofimani Ach. Dirina repanda Ach. Urceolaria scruposa Ach. — var. gypsacea Ach. actinostoma Ach. — f.* farinacea Villarsi Ach. Phlyctis argena Ach.—Vista tan solo en un poste de telégrafo de la carretera de Soria. Psora Lecideaceos. decipiens Ach. acervulata Ny. lurida Ach. — f.* pallescens. testacea Htffm. Toninia mamillaris Duf. vesicularis Ach. squalida Ach.—Sobre el yeso de las tapias viejas. (Val de Arenas.) candida Ach. subtabacina Nyl. El nombre de ¢adacina dado 4 esta especie por Massalongo ha sido ligeramente modificado por el Dr. Nylander para que no se confunda con la Zecidea tabacina Ram., que es una espe- cie diferente y se distingue por sus esporas sencillas y elip- soideas. Lecidea geographica Scher. morio Scher. albo-atra Scheer var. vulgata. 192 ACTAS DE.LA SOCIEDAD ESPANOLA Lecidea levigata Nyl. — leptocline Krb. — — var. gevrensis. — petrea F\ot. — — var. Montagne. — gemmata F \ot. (*) — portuensis Ny). — eleochroma Ach. var. enteroleuca Ach. — fusco-atra Ach. var. grisella Scher. Buellia epipolia Ach. — lavata Nyl. — badia Fiot. — badio-atra Ny). — epigea Th. Fr. Grafidaceos. Arthonia punctiformis Ach.—Sobre la corteza del Cellis austra- /is exclusivamente (Campiel). Endocarpaceos. Endocarpon miniatum Ach. — leptophyllum Ach. — hepaticum Ach. — rufescens Ach. — crassum Anzi. Verrucaria rupestris DC. — nigrescens Ny}. — — var. fusca Pers. — Schereri E. Fr. Colemaceos. Leptogium lacerum Ny}. var. pulvinatum Ach. Collema melenum Ach. — granuliferum Ny. — pulposum. — flaccidum Ach. — nigrescens Ach. — plicatile Ach. Onmphalaria coralloides Ach. Gonionema velutinum Wiilnb.» Pyrenopsis lecanopsoides Nyl. DE HISTORIA NATURAL. 193 Sesion del 6 de Septiembre de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. Leida el acta de la sesidn anterior fué aprobada. — Quedaron admitidos como socios numerarios los senores: Tarin y Juaneda (D. Rafael), Doctor en Ciencias natura- les, de Valencia, propuesto por D. Mauricio C. de Onis; Gimier (D. Luis), Licenciado en Ciencias naturales, de Mahon, propuesto por D. Ignacio Bolivar. —Se hizo una nueva propuesta de socio. —Il Sr. Secretario leyé varias comunicaciones de sefores socios dando gracias por su admisién: una de &. A. el Archi- duque Luis Salvador por su nombramiento de Socio protector; otra del Sr. Preudhomme de Borre, de la Fauvette, Suiza, por el de Socio correspondiente; otra de la Senora Viuda de Charles Brongniart, en la que expresa su reconocimiento por la distin- cidn otorgada a su difunto esposo proponiéndole para Socio corresponsal antes de tener noticia esta Sociedad de su falle- cimiento; y, por Ultimo, noticias de gracias por su admisién como socios numerarios de los Sres. D. Antonio A. Dominguez, de La Laguna de Tenerife, y D. Ventura Gallegos y Sardina, de Mendoza, Republica Argentina. —El Sr. Presidente indicé que deberia hacerse constar en el acta la complacencia con que se ha enterado la Sociedad de la muy afectuosa carta que el Sr. Archiduque Luis Salvador le habia dirigido, dando las gracias por su nombramiento, al cual no se creia merecedor. —Se did cuenta a4 continuacién de las publicaciones recibi- das ultimamente a cambio y como donativo. Entre estas ulti- mas figuran un ejemplar de la obra titulada Serie imperfecta de las plantas aragonesas espontuneas, particularmente de las ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.— SEPTIEMB2E, 1899. 13 194 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA que habitan en la parte meridional, segunda edicién, por los farmacéuticos D. Francisco Loscos y D. José Pardo: Alcaniz, 1867; regalo de nuestro consocio D. José Pardo, y un ejemplar del nimero del 1.° de Agosto ultimo de la Revista de Montes, en la cual nuestro Presidente D. Primitivo Artigas ha publica- do la biografia del ingeniero de Montes y renombrado bota- nico Excmo. Sr. D. Maximo Laguna, consocio nuestro y ex- Presidente de esta Sociedad, por la que ha mostrado siempre senalado interés. Acordandose dar las gracias a los autores. —El Sr. Bibliotecario hizo especial mencidn del valioso do- nativo realizado por 8S. M. el Rey de Portugal de la obra de que es autor, Resultados das investigacoes scientificas feitas a hordo do yacht «Amelia» J. A pesca do Atum no Algarbe en 1898. Lisboa 1898. Acordandose manifestar a tan egregio donante la profunda gratitud de la Sociedad por su generoso despren- dimiento. —KEl Sr. Secretario did noticia de haberse recibido las cir- culares siguientes: de la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona, rogando a todas las personas que posean datos biograficos de los académicos de la misma fallecidos que los faciliten al Presidente 6 Secretario de dicha Real Academia, con objeto de completar la Seccién necroldgica que tiene en publicacidn; de la Academia de Ciencias y Artes de Con- necticut, Estados-Unidos, invitando a la celebracién de su cen- tenario que tendra lugar el 1] de Octubre de 1899; del Comité de la AsociaciOn britanica para las publicaciones zoologicas y botanicas, dando cuenta de haber acordado hacer extensivas i la Botanica los principios y reglas adoptados para la Zoolo- gia en la reunién celebrada en Toronto en 1897, que son ya conocidas de la Sociedad por haberse publicado en sus Ac/éas, y encareciendo la conveniencia de atenerse a ellos. —IK1 Sr. Bolivar presentO una Memoria de nuestro consocio D. Fibicio Hierro, titulada Datos para la florula de Castilla la Vieja, y se acordé pasara a la Comisién de publicacion. —El mismo Sr. Bolivar presenta la siguiente nota que le ha comunicado D. Luis Aterido, Jardinero mayor del Botanico de Madrid, con el deseo de que se acuerde por la Sociedad su insercién en las Actas si se estima de interés para el conoci- miento de la geografia botanica de la Peninsula, como asi fué acordado, DE HISTORIA NATURAL. 95 «Lista ordenada metodicamente de muchas plantas de la provincia de Cuenca, por D. Luis Aterido. Llevado por mi aficion al estudio y conocimiento de las plan- tas espontaneas de la Peninsula, procuro recolectar, siempre que tengo ocasidn para ello, especies con que aumentar el her- bario espanol del Jardin Botanico, tanto con nuevos ejempla- res como igualmente con otros procedentes de localidades de donde no se hayan citado las especies, 4 fin de contribuir al conocimiento de la vegetacidn espontanea. La presente lista de plantas puede dar idea de las que existen en la provincia de Cuenca, unas vistas y cogidas otras, en los términos de Almonacid del Marquesado y Villarejo de Fuentes. en los pocos dias que he tenido disponibles en la segunda quincena de Mayo, época la mas oportuna para herborizar en dichas loca- lidades. La mayor parte de las especies indicadas son bastante comu- nes en toda la Peninsula; pero como esta lista no tiene por objeto dar &@ conocer plantas nuevas 6 poco conocidas, podra servir de guia para algun aficionado que, contando con mas tiempo y dedicandose al estudio de la vegetacién espontanea, encontraria especies muy interesantes, como he tenido ocasién de observar por algunas de las recogidas en las indicadas loca- lidades. Entre las especies recolectadas las hay notables, tales como la Barkhausia alpina DC., no citada como espontanea en la Peninsula, y cuyo ejemplar he comparado con los que existen en el herbario general del Jardin Botanico;: la Sternbergia col- chicifora W. et Kit.; la Thymelea elliptica Endl. y algunas otras. Kste trabajo puede servir de apendice al Catalogo de las plantas espontaneas publicado por el Excmo. Sr. D. Daniel de Cortazar en la Deseripcion Sisica, geologica y agrolégica de la provincia de Cuenca. Nigella arvensis L. Ranunculus arvensis Li. Adonis estivalis L. — graminenus L. Delphininum peregrinum L. — — sceleratus L. Ranunculaceas. 196 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Papaveraceas. Chelidonium majus L. Glaucium corniculatum Curt. Typecoum grandifiorum Benth. — pendulum \. Papaver Argemone L. — dubium lL. — Rheas i. Remeria hybrida DC. Fumariaceas. Fumaria officinalis L. — parvifora Lam. — spicata lL. Cruciferas, Alyssum calycinum \. — campestre L. — montanum L. — serpyllifolium Desf. Biscutella auriculata L. — levigata L. Camelina sativa Crantz. Capsella Bursapastoris Moench Clypeola Jonthlaspi L. Diplotaxis erucoides DC. — virgata DC. Eruca orthosepala Lge. Erysimum australe Gay, 8 sim- plex. — perfoliatum Crantz. lberis pinnata Gouan. Matthiola tristis R. Br. Myagrum perfoliatum L. Nasturtium officinale R. Br. Neslia paniculata Desw. Raphanus Raphanistrum L. Rapistrum rugosum Berg. Sinapis incand \.. - nigra L. Sisymbrium Columne Jacq- — lrio lL. — Sophia L. Thlaspi arvense L. Resedaceas. Reseda alba. — lutea L. — Luteola lL. — Phyteuma L. — virgata Boiss. et Reut. Cistdceas. Cistus ladaniferus L. — salviefolius L. Fumana procumbens Gr. et Gdr. Halimium umbellatum Spach. Helianthemum glaucum Pers. — montanum Vis. — paniculatum Dun. — pilosum Pers. — squamatum Pers. — vulgare Gertn. Poligaleas. Polygala monspeliaca \. Cariofileas. Agrostemma Githago L. Arenaria capitata Lam, 8 que- rioides. — serpyllifolia L. — tenuifolia L. Cerastium dichotomum L. — perfoliatum L. — semidecandrum L. Dianthus Armeria L. — prolifer L. | Saponaria officinalis L. — Vaccaria L. Silene bipartita Dest. DE HISTORIA NATURAL. Silene conica L. — conoidea L. — inflata Sm. — Muscipula L. — nocturna LL. Spergula pentandra L. Spergularia rubra Pers. Velezia rigida L. Linaceas. Linum narbonense lL. — strictum Ll. | — tenuifolium L. Malvaceas. Althea hirsuta L. — officinalis L. Lavatera triloba iw. Malva hispanica lL. — parviflora L. — sylvestris L. Hipericineas. Fipericum perforatum L. Ampelideas. Vitis vinifera L. Geraniaceas. Erodium ciconium Willd. — cicularium LW Herit. — malacoides Willd. Geranium dissectum \,. Rutaceas. Dictamnus albus L. Peganum Harmala i. Ruta montana L. Leguminosas. Anthyllis lotoides L. — vulneraria L. vubriflord. 197 Arthrolobium scorpioides DC. Astragalus hamosus L. — macrorrhizus Cav. — sesameus L. — stella Gou. Coronilla minima L, Cytisus argenteus L. Dorycnium sugruticosum Will. Genista Scorpius DC. Hedysarum humile L. Hippocrepis ciliata Willd. — comosa L. Lathyrus angulatus UL. Lotus corniculatus L. — pedunculatus Cav. — rectus L. Medicago falcata L. — lupulina L. — sativa L. Melilotus leucantha och. — parviflora Dest. Onobrychis matritensis B. et Reut. — sativa Lam. Ononis Natriz L. — procurrens Wallr. Psoralea bituminosa L. Retama spherocarpa Boiss. Spartium junceun L. Trifolium arvense L. — Cherleri lL. — hirtum All. — Lagopus Pourr. — pratense L. — repens L. — scabrum L. — lomentosum L. Trigonella gladiata Stev. — mouspeliaca L. — polycerata L. 198 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Rosaceas. Crategus oxyacantha L. Potentilla reptans L. Poterium Sanguisorba lL. Rosa canina L. Rubus discolor Weihe. — Jfruticosus L. Tamariscineas. Tamari« gallica L. Cucurbitaceas. Bryonia dioica Jacq. Momordica Elaterium L. Portulaceas. Telephium Imperati L. Paroniquieas. TTerniaria glabra L. — hirsuta L. Minuartia dichotoma Lefil. Paronychia argentea Lam. — capitata Lam. Queria hispanica Leff. Crasulaceas. Sadum album UL. Sempervivum tectorum L. Umbeliferas. Ammi Visnaga Lam. Bupleurum fruticescens L. -—— opacum Lge. — rigidum lL. — rotundifolium L. Caucalis daucoides L. — leptophylla lL. Conium maculatum L. Eryngium campestre lL. Feniculum vulgare Geertn. Scandiz australis L. — hispanica Boiss. — Pecten Veneris L. Smyrnrium Olusatrum lL. Thapsia villosa L. Tordylium maximum L. Torilis nodosa Geertn. Turgenia latifolia Hoffm-~ Araliaceas. Hedera Heliz \.. Rubiaceas. Asperula arvensis L. Galium Aparine L. — sylvestre Poll. — tricorne With. — verum L. Rubia tinctorum L. Valerianeas. Centranthus Calcitrapa DC. Valerianella coronata DC. — echinata DC. Dipsaceas. Cephalaria leucantha Schrad- — syriaca Schrad. Dipsacus sylvestris Mill. Scabiosa Columbaria L. Trichera arvensis Schrad. — subscaposa Nym. Compuestas. — Achillea Ageratum L. — Millefolium lL. Anacyclus clavatus Pers. Andryala arenaria B. et Reut- — macrocephala Boiss. | Anthemis arvensis L. — nobilis L. DE HISTORIA NATURAL. 199 Artemisia Absinthium L. — aragonensis Lam. — glutinosa Gay. Asteriscus aquaticus Moench. Atractylis humilis L. Barkhausia alpina DC. — taraxacifolia DC. Bellis perennis 1. Calendula arvensis L. Carduus lanceolatus L. — nutans L. — tenuifiorus Curt. Catananche cerulea L. Centaurea alba lL. — Apula Lam. — Calcitrapa lL. — Cyanus L. — hyssopifolia Vahl. — paniculata L. — Seusana Chaix. Cirsium odontolepis Boiss. Cricus benedictus L. Cotula aurea L. Crepis tectorum L. Crupina vulgaris Cass. Echinops Ritro lL. Hvaxr exrigua DC. Filago arvensis L. — spathulata Presl. Galatella aragonensis Nees. Hedypnois polymorpha DC. Helichrysum serotinum Boiss. — Stechas DC. Hieracium Pilosella UL. Inula montana L. — viscosa Ait. Jasonia glutinosa DC. Jurinea humilis DC. Kentrophylium lanatum DC. Lappa major Geertn. Leuzea conifera DC. — raponticoides Graells. Microlonchus salmanticus DC. Micropus bombycinus Lag. — supinus L. Onopordon Acanthium \.. Pallenis spinosa Cass. Podospermum laciniatum DC. Prolongoa pectinata Boiss. Pyrethrum Parthenium Sm. Rhagadiolus stellatus DC. Santolina Chamecyparissus 1. — rosmarinifolia L. Scolymus hispanicus lL. Scorzonera graminifolia L. — hispanica L, Senecio gallicus Chaix. — vulgaris L. Serratula flavescens Poir. Silybum Marianum Geertn. Taraxacum obovatum DC. Thrincia hirta DC. — hispida Roth. Tragopogon porrifolius L. — pratensis L. — crocifolius L. var. bomby- cinus Gdgr. Xanthium macrocarpum DC. — spinosum L. Xeranthemum cylindraceum Sibth. Campanulaceas. Campanula Erinus L. — Rapunculus L. Sasione montana La. Primulaceas. Anagallis arvensis L. Androsace maxima L. 200 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Asterolinum stellatum Link Coris monspeliensis L. Gencianeas. Erythrea Centaurium Pers. Convolvulaceas. Convolvulus arvensis L. — lineatus L. Cuscuta europed L. Borragineas. Aachusa italica Retz. Cynoglossum cheirifolium L. — officinale \.. Echium plantagineum . — pustulatum Sibth. — vulgare L. LTeliotropium europeum L. Lithospermum apulum Vahl. — arvense L. — fruticosum L. Omphalodes linifolia Moench. Solanaceas. ITyosciamus niger L. Lycium europeumn i. Solanum Dulcamara \. — nigrum L. ‘scrofularineas. Chenorrhinum origanifolium Lee. — serpyllifolium Lee. Linaria amethystea H. et Link. — cesia DC. — hirta Mench. — melanantha B. et Reut. — micrantha Spr. — spartea Hoffm. et Link. Odontiles rubra Pers. Odontites tenuifolia G. Don. Scrophularia canina I. Trizago Apula Stev. Veronica Anagallis L. — Beccabunga i. — Cymbalaria Bodar. — hederefolia \.. Orobancaceas, Orobanche amethystea Thuil. — cruenta Bertol. Phelipea cerulea C. A. Mey. Verbenaceas. Verbena officinalis . Labiadas. Betonica officinalis L. Calamintha Acinos Benth.- Lamium anmplezcicaule L. — purpureum L. Lavandula pedunculata Cav. — Spica DC. — Slechas L. Lycopus europeus L. Marrubium supinum L. — vulgare lL. Mentha Pulegium L. — rotundifolia L. Phlomis Herbaventi L. — Lychnitis lL. Rosmarinus officinalis L. Salvia argentea L. — hispanorum Lag. — pratensis L. — Verbenaca L. Satureja montana L. Siderilis hirsuta L. — incanda L. Teucrium capitatum L. — Chamedrys \. DE HISTORIA NATURAL. Teucrium lanigerum Lag. — Polium . — pseudochamepytis L. Thymus Mastichina \L. — vulgaris — Zygis L. Plumbagineas. Armeria allioides Boiss. Plumbago europea i. Statice echioides L. Plantagineas. Plantago albicans L. — Coronopus L. — Cynops L. — lanceolata L. Salsoleas. Chenopodium ambrosioides L. Kochia scoparia Schrad. Salsola vermiculata L. Poligéneas. Polygonum aviculare L. — Bellardi All. Timeleas. Thymelea elliptica Endl. Santalaceas. Thesium alpinum L. Aristoloquieas. Aristolochia Pistolochia L. Kuforbiaceas. Euphorbia falcata lL. — exigua L. 8 retusa. — serrata lL. Mercurialis tomentosa L. Urticaceas. 20L Parietaria diffusa M. et Koch. Urtica dioica L. Moreas. Ficus Carica L. Cupuliferas. Quercus cocciferda I. — lex i. Coniferas. Suniperus communis L. Orquideas. Ophris aranifera Huds. Irideas. Gladiolus illyricus Koch. Tris germanica li. — Pseudoacorus L. Amarilideas. Sternbergia colchicifora W. Kit. Esmilaceas. Asparagus acutifolius L. Ruscus aculeatus L. Smilazr aspera \. Liliaceas. Allium Ampeloprassum L. Asphodelus cerasiferus Gay. — fistulosus L. Bellevalia comosa wunth. et Bothryanthus vulgaris Kanth. Lritillaria hispanicaB. et Reut. Ornithogalum narbonense L. Colchicaceas. Merendera Bulbocodium Ram. 202 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Juncaceas. Cynosurus echinatus L. Aphyllanthes monspetiensis L. | Pactys glomerata L. Juncus effusus L. — hispanica Roth. Lehinaria capitata Desf. ye “, lifaceas. Elymus Caput Meduse L. Typha latifolia L. Festuca ovina L. — pratensis Huds. LHolcus mollis L. Arum maculatum L. Hordeum secalinum Schreb. Keleria cristata Pers. — phileoides Pers. Lolium perenne L. — tlemulentum L. Gramineas. Lygeum Spartum lL. Macrochloa tenacissima Kunth. Melica ciliata UL. Mibora verna P. de B. Phalaris canariensis \.. Phileum pratense L. Aroideas. Ciperaceas. Cyperus rotundus DC. Isolepis Holoschenus R. et 8. _Legilops ovata L. — triuncialis L. Agrostis capillaris L. — nebulosa B. et Reut. Aira caryophyllea L. Anthoxanthum odoratum \. Phragmites communis Trin. Arrhenatherum avenaceum P, | Pod anaua lL. de B. Polypogon monspeliensis Desf. Sclerochloa dura P. de B. Stipa capillata L. — pennata L. Triticum sylvaticum DC. Wangenheimia Lima Trin. A vend barbata Brot. — fragilis L. Brachypodium ramosum R.et8. Briza maxima L. — minor L. Bromus mollis lL. ee x Equisetaceas. — squarrosus L. Fquisetum arvense \. — tectorum L. Cynodon Dactylon Pers. SRS: Cynosurus cristatus L. Celerach oficinarum Willd. —El Sr. Bolivar presenté la siguiente nota en nombre del Sr. Konow, de Teschendorf, que comprende la enumeracién de los Tentredinidos recogidos en su viaje al Asia menor por nuestro colega D. Manuel Martinez de la Escalera y la descrip- cién de las especies nuevas. DE HISTORIA NATURAL. 203 «Chalastogastrorum nove species et varietates, quas D. Escalera ex Asia minore reportavil, a Fr. W. Konow, p. descripte. 1. Gun. Megalodontes Lair. 1. M. Hscalerai n. sp. ¥ QP. Niger, nitidus, parce nigro- pilosus, uberius flavo vel viridi flavo-variegatus; facie macu- lis tribus, 2 fasciis temporalibus cum vittis verticalibus fere confluentibus, pronoti angulis, tegulis, mesonoti maculis 4, mesopleurorum majore parte superiore, abdominis fasciis dor- salibus et ventralibus, maris ventre toto flavis vel flavo-viri- dibus; metanoto utrobique pone cenchros flavo-maculato; ab- dominis segmentis 1° et 2° dorsalibus utrobique macula majo- re flava ornatis, ceteris late flavo-limbatis; fasciis medio ma— cis minusve emarginatis; feminze segmentis ventralibus 4° et 5° late limbatis; pedibus flavis; coxis, trochanteribus, femorum anteriorum basi nigris; coxis posticis flavo-lituratis; tibiarum posteriorum apice et tarsis rufescentibus; alis fulvescentibus, limbo costali brunnescente; venis fusco-testaceis; stigmate testaceo, basi albicante. Parvus, inter I. flabellicornem Germ. et M. luteiventrem Knw. intermedius; sincipite et mesonoto sparsius punctatis, nitentibus; mandibulis flavis, apice nigris; antennis 15-16 arti- culatis rufis; articulo secundo nigro, primo flavo vel nigro et subtus flavo-vittato, tertio interdum basi nigro; articulo tertio secundum sesqui longitudine superante, duos insequentes requante; articulis antepeenultimis 4° longioribus; pectinis ra- diis 1-6 quattuor articulos insequentes longitudine wquanti- bus; mesonoti scutello elongato, latitudine sua apicali longio- re, nitente; mesopleuris nitentibus, vix punctulatis. Long. 8,5-9,5. Patria. Asia min. (Akbes, Gtilex). Differt ab affinibus capite et mesonoto multo sparsius et haud rugoso-punctatis, mesopleuris levibus, scutello elon- ewato etc., a M. flabellicorni Germ. antennarum articulo tertio breviore et fasciis abdominalibus multo latioribus. 2. Gen. Tristactus Aum. 1. Zr. punctatus Knw. 3. Mas femine in «Entomol. Nachrich- ten», 1898, p. 108, n. 3 descriptee convenit, sed facie inferiore 204 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA et ventre omnino albis; vittis verticalibus et fasciis abdomina- libus mediis fere defirientibus; mesonoto et tegulis nigris, in- maculatis; pedibus nigris, genibus posticis vix albo-maculatis. 2. Zr. punctatus Knw. 9 var. candidatus nov. var. Abdominis omnibus segmentis dorsalibus late albo-fasciatis, fasciis con- tinuis, haud interruptis; segmentis ventralibus magis minus- ve albo-limbatis; coxis posticis albo-maculatis; genis inter- dum macula in oculorum angulo supero-interiore sita ornatis. Hane varietatem pulchram Dom. Escalera in Asia minore prope ab Akbes urbe invenit. 3. Gen. Arge Schrank. 1. A. segmentaria Pz. var. rufiventris nov. var. % 2. Abdomen rufum, basi apiceque magis minusve nigrum; ale lutescen- tes; cetera ut in specie typica. Varietas pulchra a claro Dom. Escalera ad Asie minoris oppidum Akbes dictum inventa. 4. Gen. Allantus Jv. 1. A. duminosus n. sp. oO. Niger, nitidus; ore, antennarum 2 articulis basalibus, pronoti angulis posterioribus latis, tegu- lis, scutello, abdominis segraento 5° dorsali toto, primo et sexto insequentibusque basi nigra excepta sulphureis; seg- mento 4° dorsali postice sulphureo-limbato; maris ventre,—basi excepta,— concolore, femine segmento 4° ventrali sulphureo- marginato; pedibus concoloribus, coxis et feminz femoribus nigris; tibiarum apice tarsisque magis minusve rufescenti- bus; unguiculis fuscis; maris femoribus anterioribus postice nigro-maculatis; femoribus posticis postice nigris; feminze femoribus anterioribus antice pallido-vittatis: mandibularum apice brunneo; antennarum articulo tertio basi luteo; flagello nigro, interdum e luteo fusco; alis lutescenti-hyalinis; nodulo medio nigro; stigmate luteo apice fuscescente. All. lanto Knw. simillimus et affinis sed fere minor, palpis crassioribus, antennarum flagello obscuro, alarum nodulo medio nigro, scutello multo minore, mesopleuris haud sculp- turatis facile distinguendus; capite et mesonoto impunctatis, leevibus, nitentibus; capite et mesopleuris cano-pubescenti- DE HISTORIA NATURAL. 205 bus; hoe pone oculos subdilatato; palporum maxillarium ar- ticulo antepeenultimo subdilatato et compresso; mesonoti scu- tello parvo, apice evidentius punctulato; mesopleuris levibus. Long. 8,5-10 mm. Patria. As. min. (Akbes). 2. A. serenus n. sp. ¢ OQ. Niger, nitidus; ore, antennarum 2 articulis basalibus, pronoti angulis posterioribus, tegulis, abdominis segmento 5° dorsali et 4° ventrali, feminee etiam seementis 1° et 7-9 dorsalibus, maris 3 ventralibus anteriori- bus anoque sulphureis; se@mento 4° dorsali et maris primo postice sulphureo-marginatis; pedibus sulphureis; posticorum cvenibus et tibiarum apice nigris; tarsis posticis fusco-annula- tis: coxis maris summa basi, feming —summo apice excepto — nigris; alis hyalinis, stigmate luteo, costa et stigmatis api- ce rufescentibus. All. Nazareensi André similis et affinis sed paullo robustior, capite et mesonoto levibus, vix punctulatis, cano-pubescenti- bus; hoe crasso, pone oculos non angustato; clipei apice pro- funde exciso; antennarum articulo tertio 4° non duplo longio- re; vertice crasso, longitudine sua vix sesqui latiore; mesonoti scutello basi levi, apice subruguloso-punctato; mesopleuris punctulatis, subopacis. Long. 8-9,5 mm. Patria. Asia min. (Alexandrette). 3. A. jugalis Knw. ¢¢. Mas femine in « Verhandl. zool. bot. Gesellschaft, Wien» 1898, p. 4 descripte convenit, sed ventre pedibusque et pectoris medio omnino sulphureis; tarsis poste- rioribus nigricantibus. Long. 7-8 mm. Enumeratio specierum. Megalodontes Escalerai n. sp. ¢ 9. Akbés, Jenidje Kale. Tristactus punctatus Knw. 7 ©. Akbés. — — var. candidatus n. v. 9. Akbés. Calamenta filiformis Ev. ¢ ©. Akbés. Cephus nigrinus Thoms. ~. Akbés. Trachelus tabidus ¥. var. macilentus F. c7 &. » Alexandrette. Monoplopus Idolon Rossi 7. Akbés. Ateuchopus Libanensis André <7. Akbés. Oryssus abietinus Scop. -. Akbés. 206 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Amasis lateralis Brullé. ¢. Akbés. Arge pleuritica Kl). o Q. Akbés. Atolica Knw. 7. Akbés. segmentaria Pz. ¢ ©. Akbés, Jenidje Kale. — var. rufiventris n. v. 0 9. Akbés. cyaneocrocea Forst. var. Syriaca Mocs. o Q. Akbés. debilis Kuw. J 2. Akbés, Aidin, Aghir Dhagh. Rose L. ©. Bimbogha Dhagh. Schizoceros furcatus Vill. ° var. melanocephalus Pz. Aidin. Cladius spec. 9. Akbés. Pteronus testaceus Thoms. 9 (?). Bimbogha Dhagh. miliaris Pz. OQ. Akbés. Lyge@onematus spec. 9. Akbeés. Pristiphora fausta Htg. co”. Akbés. Tomostethus funereus WK1. 9. Alexandrette. Athalia glabricollis Thoms. 9. Aidin, Smirna. lineolata Lep. (Ros@ auct.) var. cordata Lep. 9. Enyusek Dhagh. — var. liberta kl. ~. Bimbogha Dhagh, Jenidje Kale. dimidiata knw. ¢ 9. Akbés. colibri Christ. & © (=spinarum ¥.) Jenidje Kale, Akbés. annulata F. 7. Akbes. Selandria serva ¥. ¢7. knyusek Dhagh. — var. interstitialis Kuw. co 2. Akbés. stramineipes K\. 7 Q. Akbés. Strongylogaster cingulatus ¥. Q et var. Akbés. Pecilosoma Klugi Steph. 2 (= carbonaria Knw.) Akbés. Emphytus didymus W\. 9. Akbés, Hamidie. spec. 2. Akbés. Dolerus Etruscus WK. OQ. Aidin. lremulus Kl. Q. Akbés. Tenthredopsis lasia Knw. 2. Abbés. Beuthini Rudow. Q. Akbés. Macrophya rustica L. ¢ 9. Akbés. — postica Brullé o% 9. Akbés, Alexandrette. erythropus Brullé, 9. Smirna. diversipes Schrnk. 9 (= hematopus ¥.) Akbés. crassula Kl. JQ. Akbés. albicincta Schrnk. ¢ 9. Akbés. blanda F. Q var. Akbés. DE HISTORIA NATURAL. 207 Allantus annulatus kl. ©. Alexandrette. — luminosus n. sp. o Q. Akbés. — costatus Kl. ~ var. Akbés, Smirna. — — var. Grecus Knw. 9. Smirna. — Dahli Kl. 4 Oo. Aidin, Smirna. — marginellus F. %. Bimbogha Dhagh. — serenusn. sp. oo Q. Alexandrette. — scutellaris Knw. ~ ©. Akbés. — jugalis knw. co. Akbés. —El Sr. Pau, de Segorbe, remite la siguiente nota: «Un lino nuero. Nuestro activo consocio D. Francisco de las Barras se sirvid honrarme remitiéndome un paquetito de plantas que contenia 100 ntiimeros pertenecientes a las cercanias de Palencia. No voy a ocuparme de todas las especies que me envid; mi inten- cidn se reduce tan solo a comunicar el descubrimiento de un lino nuevo, hermoso, que pertenece a un tipo autdnomo y de los mas independientes que se han propuesto hasta el dia. Dejo para tan laborioso catedratico del Instituto palentino la relacidn completa de todas las formas recogidas, permitién- dome indicar unicamente que entre las muestras recibidas veo formas pertenecientes a especies tan curiosas como el Alyssum hispidum Loscos et Pardo, Linum austriacum auct. hisp. Veronica Jabalambrensis Pau=V’. commutata Willk.. Vicia styiata M. B. (V. pannonica auct. hisp.=V. purpurascens DC.), Aunthriscus neglectus B. R. y otras mas no indicadas hasta el dia de la provincia de Palencia. También he reconocido un fragmento de tomillo, ciertamente curioso, del cual nada podria suponerse a no encontrarse en mi coleccién dos ejemplares recogidos en los montes de Leén. y que me permiten asegurar que se trata de la misma especie. Yo creo que tanto el trozo de Palencia como las dos muestras leonesas pertenecen al Z/iymus bracteatus Lge., especie que no se citaba mas que de los montes Carpetanos y Serrania de Cuenca, no siendo rara, a juzgar por mis muestras, en las pro- vincias de Leén y Palencia, perteneciendo 4 la ultima region con seguridad el 7/. cespiticius de aletin autor (véase Actas, 2038 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA 1897, p. 200), pues no juzgo probable que dicha especie portu- guesa se corra tanto hacia el Occidente. Todos los tomillos espanoles de la subseccién Serpyllum, brac- leatus, angustifolius, exceptuandose quizas el 7A. granatensis Boiss., pertenecen 4 un solo tipo muy polimorfo, si bien el Th. clandestinus Pau lit.=TZh. granatensis 8 micranthus Willk.! parece servir de transito entre esta especie y las restantes. Baste decir que el Zh. serpylloides Bory es sumamente pare- cido al coloratus B. R., el Th. bracteatus Lee. al Algeriensis B. R , y, fuera de la vestidura, el 7%. bracteatus Lge. es sumamente afine al Mumbyanus B. R. Las afinidades del 7h. serpylloides con el bracteatus ya fue- ron expuestas por Willkomm (Prod7. 11, p. 406) cuando dice: «Differt a preced., cui valde affinis.» Todas estas formas, propuestas como especies por los auto- res, no son mas que variedades de un mismo tipo especifico obligado a cambiar por asiento diverso; y los bractealus, ser- pylloides, coloratus, Mumbyanus, Algeriensis, etc., pueden con- siderarse bien como variedades, bien como subespecies. El Zh. serpylloides Borg., propio de la region nival (Campo exs. sub Zh. granatensi) y de los 2.300-2.800 m. (Willkomm! in Sched.) claro es que se ha de presentar achaparrado, para defenderse del clima; en cambio el 7%. coloratus B. R. de mi coleccién, recogido 4 los 800 m. de altura, se presenta con los ramos alargados, hojas separadas, subarbusto (como dicen los autores argelinos, y Boissier y Reuter en la obra Pugillus pl.: Sufrulex elegans 3-4 pollicaris) y con todos los caracteres que presentan las matas de regién baja 6 abrigada. Que a tales diferencias no debe concedérseles importancia diferencial taxonémica, lo declaran esa multitud de plantas de la regidn inferior al penetrar en la montana, pues el via- jero ve, 4 medida que se eleva, las matas achaparrarse defen- diéndose 4 su manera de la inclemencia del clima. Terminaré dando la descripcién de la nueva especie de lino de Palencia 4 que antes me referi, que es la siguiente: Linum Barrasii nov. sp. Planta de unos 40 cm., lampifa, con tallos lenosos, dere- chos, sencillos en la base, ramosos superiormente; ramas muy DE HISTORIA NATURAL 209 hojosas y sencillas, menos en el apice, que se dividen en tres ramitas, las cuales llevan las flores; hojas @laucas en el envés, que visto con lente parece llevar igera vestidura plateada y brillante, verde en el haz, aovadas, abrazadoras y acorazona- das en la base, con el apice redondeado las inferiores, agudas las intermedias y puntiagudas las superiores; flores en cimas que llegan 4 ser espiciformes en la fructificacidn ; bracteas plateado-membranosas en la punta; pedtnculos cortos, en la fructificacioén alargados; sépalos lanceolados, anchamente pla- teado-membranosos, mucronado-aristados; pétalos de 20 mm., espatulados, emarginado 6 redondeado el apice, azules, larga- mente adelgazados en una amarilla, tres veces mayores que los sépalos; capsula inclusa, pequena, trasovado-acuminada. Proximo al Z. Narbonense L. Monte de Palencia. Mayo, 1899.» —Kl Sr. Calderon, en su nombre y en el de algunos conso- cios, indico que figurando en el proyecto de los nuevos presu- puestos la supresién de la Estacién de Zoologia maritima de Santander, tinica que existe en nuestro pais, y escuela de en- senanza de los alumnos de la Facultad de Ciencias, esta Socie- dad deberia elevar su voz para hacer presente al Sr. Ministro de Fomento el perjuicio que semejante supresién acarrearia & la ciencia espaniola y la escasa economia que de ella obtendria el Estado, ya que atin es tiempo de evitar esta medida. Des- pués de algunas observaciones por parte del Sr. Presidente y de algunos sefiores socios, se acordé redactar una Exposicién al Sr. Ministro de Fomento, que le seria presentada por una Comision nombrada al efecto. Sesion del 4 de Octubre de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. Se did lectura del acta de la sesidn anterior, que fué apro- bada. —(Qued6 admitido como socio numerario Garcia Varela (D. Antonio), Licenciado en Ciencias natu- rales, de Madrid, propuesto por D. Ignacio Bolivar. ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.— OCTUBRE, 1899. 14 210 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA —El Sr. Bibliotecario dié cuenta de las obras ultimamente recibidas como donativo y 4 cambio, acordandose dar gracias 4 los donantes. y —El Sr. Presidente propuso, y asi se acorddé, autorizar a la Junta directiva para repartir las circulares impresas en de- manda de sus obras y publicaciones 4 los sabios extranjeros que estime oportuno. —El Sr. Secretario presenté en nombre del Sr. Bolivar una Memoria taxondmico-bibliografica sobre los ortépteros, que pas6 4 la Comision de publicacion. —Se did lectura 4 la siguiente nota remitida por el senor de la Fuente, de Pozuelo de Calatrava: «Datos para la fauna de la provincia de Ciudad-Real (1). XII. Especies de Pozuelo de Calatrava. Anthaxia stupida Mars. (Coléopt.) Citado de Berberia y Argelia; nuevo para Kuropa. Anthicus validus Pic. v. dispar Pic. (Coléopt.) n. var. Différe de la forme type par la coloration générale plus claire et du moins le prothorax entiérement rougedtre, sans trace de coloration foncée sur le disque. Espagne centrale: Pozuelo (de la Fuente, in coll. Fuente et Pic types!).—Maurice Pic. In Miscellanea Entomologica, 1899, p. 21. Dorcadion Fuentei Pic. (Coléopt.) n. sp. Noir, densement revétu d’une pubescence fonciére noire ou brune, plutdt brune et trés étendue sur l’avant-corps, parfois parsemée de poils grisatres, avec les antennes et les pattes, soit entiérement roussdtres, soit en partie rembrunies; © ova- le, o7 subparalléle et assez allongé. Téte a pubescence dense, mélangée de brun fauve ou grisdtre, avec ou sans une tres (1) Véanse las Actas de 1897, pAginas 129, 177, 202 y 240; las de 1898, paginas 838, 97 y 205; y las de 1499, pag. 30. DE HISTORIA NATURAL. 211 faible ligne lisse sur le vertex. Prothorax muni sur les cétés dun tubercule plus ou moins obtus, présentant une ligne mé- diane lisse, étroite, quelquefois trés courte, et offrant une pu- bescence fonciere dense; ordinairement pas de bandes plus claires et bien tranchées sur la pubescence générale qui est brune ou grisdtre. Ecusson pubescent, & ligne médiane lisse. Elytres & pubescence générale fonciére dense noire ou brune, ordinairement noire chez - et plus ou moins brunatre chez 9, sans ligne dénudée longitudinale, mais ornés de lignes pubes- centes blanchatres qui sont: une bordure suturale et une laté- rale, une bande humérale nette, celle-ci prolongée presque jusqu’a Vextrémité, enfin une bande dorsale variable ordinai- rement tres courte chez ¢” et presque aussi longue que la dor- sale, celle-ci moins large et ordinairement moins nette chez ©. Dessous du corps foncé avec ordinairement l’extrémité de Vabdomen roussatre. Long. 12-15 mill. Espagne: Pozuelo dans la prov. de Ciudad- Real (de la Fuente, in coll. Fuente et Pic!). Voisin de Martinezi Pérez, dont il parait différer par la pu- bescence bien plus dense de l’avant-corps, sans ou avec une tres petite Ligne brillante au vertex; ces mémes caracteres, ainsi que le prothorax moins nettement tuberculé sur les cotes, le distingueront de Uhagoni Pérez. Par sa coloration se séparera en outre tres nettement (du moins d’apres la descrip- tion) de D. Bolivari Lautter (Actas de Hist. nat., 1898, p. 107,) Je suis heureux de donner a cette nouveauté le nom de no- tre collegue espagnol qui explore avec succés la région cen- trale de l Espagne.—MAauvrice Pic. In Miscell. Entomologica, 1899, p. 81. Agraphopus femoralis Horv. (Hemipt.) Citado de la Francia meridional y del Turkestan: nuevo para Espana. Gonocerus acuteangulus Goze vy. simulator Rt. (Hemipt.) De Grecia y del Caucaso: nuevo asimismo para la Peninsula. Apterola iberica Horv. (Hemipt.) n. sp. Nigra, opaca, sat dense breviterque flavo-cinereo-puberula, lateribus corporis sparsim longius ciliatis; capite cum oculis 212 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA margine antico pronoti distincte latiore, macula basali verti— cis, sepisissime etiam tylo obscure rufo-vel flavo-testaceis, bucculis flavescentibus; antennis sordide flavo-testaceis, ar— ticulo primo basin versus nigro; pronoto leviter transverso, antrorsum parum angustato, trapezoideo, remote impresso- punctato, carinula mediana obsoleta antice et postice abbre- viata instructo, macula parva media antica, macula media postica angulisque posticis, interdum etiam limbo angustissi- mo antico flavo-vel ferrugineo-testaceis; scutello transverso, latitudine sua basali duplo breviore, apicem versus pallido; hemelytris abbreviatis, squamiformibus, scutello equilongis, totis flavo-vel fusco-testaceis; limbo antico prosterni, limbis posticis segmentorum pectoris, acetabulis, orificiis odoriferis, apice ipso femorum, tibiis et tarsis plus minusve sordide fla- vo-testaceis; segmentis connexivi macula apicali rufa vel ru- fescente ornatis. oc? 9.—Long. 44 % mill. Espagne: Ciudad-Real. Quelques exemplaires recoltés par M. J.-M. de la Fuente a Pozuelo de Calatrava. Cette espece nouvelle est assez voisine de l’A. Zownii Saund., mais s’en distingue facilement par la taille plus petite, la co- loration noire du corps et par les antennes, tibias et tarses pales. Elle en differe aussi par ses antennes plus courtes, ses yeux plus saillants et par la pubescence du dessus plus cour- te.—Dr. Giza HorvAru. In Revue d’Entomologie, 1898, p. 283. Capsus punctum Ramb. v. minus Put. (Hemipt.) Descripto de Argelia: nuevo para Europa. Delphax minuscula Horv. (Hemipt.) Indicado (in Zermészet. Fiizetek, 1897) de Hungria, Caucaso y Francia meridional: nuevo para la fauna espanola. Aphalara lichenoides Put. (Hemipt.) Descripto de Oran (Africa): nuevo para la fauna europea.» —El Sr. Pau, de Segorbe, remite las siguientes notas: «La «@nothera speciosa» en Espana. Con este mismo titulo publica el Sr. H. Léveillé la determi- nacién de una muestra recogida por mi en las cercanias de DE HISTORIA NATURAL. 213 Jativa y que tengo repartida 4 mis amigos y corresponsales. La planta consultada procedia del envio hecho al Sr. Giraudias. En el Bulletin de l’Académie internationale de Géographie botanique, correspondiente al 1.° de Julio de 1899, dice el se- nor Léveillé: «Cette Wuothera n'est autre que )Hnothera spe- ciosa Nutt. reconnaissable a sa capsule qui commence a se former sur léchantillon qui nous a été soumis, et qui provient sans doute de cultures. Peut-¢tre est-il méme en voie de natu- ralisation.» La planta dicha fué recogida yendo de Jativa 4 Canals, en el talud de la carretera y antes de llegar al puente de Mon- tesa. Se encuentra este sitio bastante apartado de Jativa, y en sus cercanias no se ve ningun huerto. La creo asilvestrada y alli lo era sin duda. Yo no recojo plantas cultivadas. » « Plantas de Thiza no mencionadas en la flora balear. Después de haber recorrido las montafias de Denia, vinié- ronme deseos de visitar Ibiza; no por parecerme su regién casi desconocida botanicamente, sino por presumir que alli debia encontrarse algun tipo valenciano. No di con ningu- no, y como tengo comenzado el trabajo sobre esta isla, Unica- mente me propongo por ahora citar alguna forma nueva para las islas Baleares, sin ocuparme de ellas en otro respecto, como en lo referente a tipos, costumbres, atraso enorme de su agricultura en abandono lamentable, terrenos que visité, privilegiado clima por lo saludable, pues se me dijo que alli eran desconocidas las enfermedades del pecho, etc., etc. De 200 ejemplares que recogi, quiza el 50 por 100 pertenez— can a especies no indicadas en Ibiza; lo que da idea de lo poco conocida que es una flora. Aleunas de ellas pertenecen a tipos tan curiosos como la Micromeria inodora Bth. hallada a la sa- lida de San Lorenzo para dirigirse a San Miguel; Rapistrum orientale L. frecuente en los sembrados y no conocida por los botanicos después de haber sido recogida por Bourgeau en Soller; Senecio crassifolius Willd. de las rocas, al pie mismo de la torre que defendia la entrada de Puerto Magno; etc., etc. Algunas de las especies 6 variedades no indicadas por Bar- celd, ni en los pocos trabajos de los botanicos posteriores que conozco son las siguientes, entre las estudiadas: 214 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Kopsia Muteli (J. Sch. sub Orobanche.)—Sobre las raices de varias leguminosas y de la Salvia Verbenaca. Micromeria greca Bth. & latifolia Boiss. —Colinas de la ciudad. Barcelé (£7. de las islas Baleares, pag. 377), coloca esta espe- cie entre las excluidas. En las cercanias de la ciudad he reco- gido ademas las JZ. nervosa Bth. y M. Rodriguezii Freyn et Janca, pero no la MZ. Barceloi W. La Rodriguezii no la creo mas que forma 7obusta de la fili- Jormis Bth. frecuente en toda la isla. Linum spicatum Lam.—Frente a la isla Cunillera en Puerto Magno. Statice cosyrensis Guss.—Abunda al pie de la torre en Puerto Magno. ; Los ejemplares traidos son muy jovenes, y nada podria afirmarse si no los hubiera comparado con los de Huet (Fas. sic., 1856), resultando de una identidad absoluta. Ceratocalyx macrolepis Coss. —Pizarras entre la ciudad y Santa Eulalia. Alsine confertifora (Jzl.)\—Recogida en la isla sin localidad especial. Ulex parviforus Pourr.—Pinares entre Ibiza y Santa Eulalia. Fumaria agraria Lag. Abunda en algunos campos y riberas, saliendo de la ciudad por la carretera. Mathiola tristis R. B.—A orilla de los caminos en los colla- dos, sin poder precisar sitio. Vulpia ciliata Lk.—Pinares de Santa Eulalia. Aira caryophyllea L.—Entre la ciudad y Santa Eulalia. Trisetum bidentatum uv. sp.—En compania de las dos ante- riores. He vuelto 4 encontrar esta plantita que tenia en mi herba- rio desde el ano 1895 sin nombre, y recogida en Dos Herma- nas (Sevilla), por tratarse de una sola canita. En la isla reco- lecté sobre una docena de matitas que son muy parecidas a los Zr. Loeflingianum P. B. y Cavanillesii Trin.; pero difiere por las glumillas dentadas y no cerdosas, eje lampino. Sideritis romana L. § ibicensis nov. var.—Colinas de la ciudad. Difiere del tipo, que también es frecuente en la isla, por los dientes del caliz herbaceos, obtusos y no espinoso-aristados. DE HISTORIA NATURAL. 215 Chrysanthemum Merinoanum n. sp.—Campos de la isla fre= cuente. Intermedio entre el coronarium y segetum, pero mas afine del primero, del cual difiere por las hojas simplemente pina- do-cortadas; los aquenios son muy parecidos, pero carecen de alas tan pronunciadas, y sdlo llevan una. Planta anual, lampina, verde con tallos derechos y ramosos desde la base, con una flor terminal en cada rama; hojas pina- do-cortadas, las inferiores pecioladas y la base semiabrazadora, las superiores de figura oblonga, abrazadoras con orejuelas; lacinias lanceoladas, enteras, mucronadas; cabezuelas con pe- dunculos asurcados y engruesados en el Apice; escamas ex- ternas aovado-oblongas, verdes en el dorso, con margen ferru- g@ineo-escarioso; las interiores largamente escariosas en el apice; igulas blanquecinas, en la base amarillas, apenas fes- tonadas en la terminacién; aquenios calvos, los externos trigo- nos, con una sola ala, los internos muy poco menores y con dos costillas mas salientes; todos acostillados. Dedico esta especie al R. P. Baltasar Merino, tan conocido por sus notables descubrimientos en la Flora de Galicia, y de los cuales pienso ocuparme en una de las préximas sesiones. Umbilicus gaditanus B. R.—Abunda en los muros y rocas de la ciudad. Alguna otra especie pudiera indicar, como el Sedum glandu- losum Mor., considerada hasta el dia como propia de Cerdena; pero los ejemplares traidos de Ibiza no los he comparado con los sardos de mi herhario, para exponerla con certeza. De criptégamas celulares, plantas que no colecciono, recog algunos liquenes, y cuatro algas en Puerto Magno, con la intencién de remitirlos 4 nuestro muy distinguido compa- nero D. Benito Vicioso; como Barceléd solamente enume- ra siete liquenes, no extrano el que no se encuentre nin- guno indicado en la Flora de las Islas Baleares. Los viajeros Burnat y Barbey consignan también una lista de 15 especies en sus Noles sur un voyage botanique dans les Iles Baleares... Unicamente recuerdo, como no indicados por estos autores, los liquenes Cladonia rangiferina Hottm. f.* foliosa, Squamaria crassa DC., Sq. lentigera DC. y Lecanora rugosa Ny}. Si el Sr. Vicioso pudiera visitar las Baleares en tiempo opor- tuno, es muy posible que descubriera alguna especie nueva 6 216 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA curiosa al menos, y nos proporcionara una flora liquenolé- gica de que hoy carecemos, porque 30 especies conocidas son muy poca cosa tratandose de estas islas.» —HEl Sr. Azpeitia, por encargo del Sr. Caballero, de Ponte- vedra, presenté una preparacién que contiene 400 diatomeas hecha por dicho senor, y valiéndose del procedimiento inven- tado por él y descrito en el trabajo publicado en esta Socie- dad, verdadera maravilla de gusto y ejecucién que compite con lo mejor realizado hasta ahora por los mas reputados pre- paradores del extranjero. El Sr. Azpeitia, que ha tenido oca- sidn en el verano ultimo de visitar al Sr. Caballero y exami- nar sus trabajos microscopicos y fotograficos, hizo un cum-— plido elogio de los conocimientos y pericia técnica de nuestro distinguido consocio de Pontevedra. . —K1 Sr. Calderén dio las siguientes noticias bibliograficas: Morphometrie de Teneriffe, par Jean de Windt (Bull. de VAcad. roy. de Belgique,.3™° sér., t. xxxv,' num: 1, pagi- nas 35-44, 1898).—E] autor, teniendo en cuenta todos los datos hasta ahora consignados, rectificando algunos y anadiendo otros muchos recogidos por él, ha podido trazar el plano hipso- métrico de dicha isla que acompana a4su Memoria en la escala de 1 : 400.000 con equidistancias de 200 m. Prescindiendo de las consideraciones topograficas, sin duda interesantes, que contiene el trabajo, que no son de nuestra competencia, diremos que ofrece este estudio gran interés para la Geologia. Como se sabe, es la isla de Tenerife esen- cialmente volcanica y su edificacién fué obra de tres periodos sucesivos de erupcidn de materiales; al mas antiguo corres- ponden los rogues de Anaga, de Teno y de Adaje, los cuales formarian probablemente en su origen otras tantas islas inde- pendientes; en el segundo periodo se enlazaron unas 4 otras al mismo tiempo que las corrientes volcanicas producidas en direccién de la cresta de las Canadas edificaron la masa prin- cipal de la isla; al tercer periodo, en fin, pertenecen la masa del Pico de Teide y de las corrientes que forman el suelo de los valles de la Orotava, de Guimar y de Icod. «Aqui se pre- senta, dice el autor, una cuestién interesante: algunos auto- res, en particular Fritsch y Reiss, han atribuido 4 la erosion la produccién de las Canadas; la curva hipsométrica nos per- mite reconstituir con cierta aproximacién la masa primitiva DE HISTORIA NATURAL. 217 ‘ y evaluar la cantidad de materias que habrian sido erosiona- das; esta masa es de 237,3 km.%, lo que corresponde a un volu- men primitivo de 2.090 km.*; una novena parte de éste habria, por tanto, cubierto las Cumbres y sido eliminado. Tal erosion se efectuaria en el intervalo comprendido entre el segundo y el tercer periodo volcanico; y parece bien considerable en el caso que NOs ocupa.» La escasez de datos exactos de esta indole respecto a otras localidades impide al autor entrar en el terreno de las compa- raciones; pero de todos modos su trabajo, sobre ser suma-— mente interesante, constituye uno de los pocos de esta clase llevados 4 cabo con precisién en regiones volcanicas. Ueber das Meteoreisen von Quesa, proving Valencia, Spanien, von E. Cohen (Mitth. aus dem naturiviss. Ver. fiir, Neu-Vor- pommern u. Riigen, 1899, t. Xxx1, paginas 63-66).—El emi- nente profesor de Greifswald ha realizado, sirviéndose de noticias, fotografias y pequenos ejemplares que le hemos re- mitido, un estudio sobre este meteorito de que tienen cono- cimiento nuestros consocios por las notas del Sr. Bosca publi- cadas en los ANALES de esta Sociedad. Limitandome @ los datos nuevos consignados en esta nota con respecto a lo ya sabido por las comunicaciones del se- nor Bosca, indicaré brevemente la opinién del profesor Cohen sobre la estructura, composicion y clasificaciédn del meteorito de Quesa, hasta donde le fué posible juzgar de ellas con el es- caso material de que pudo disponer. Se trata de una octaedrita con laminas al parecer de me- diana anchura. Las columnas de kamacita son cortas, de con- torno varicoso y no dentado (1). La parte granular no ofrece (1) La primera clasificacion de este hierro metedrico como una ataxita que yo co- muniqué al profesor Bosca, es erronea y dependio de no haber visto en los pequeni- simos trozos de que se dispuso las figuras de Widmanstatten ni las de Neumann. Las esquirlas, ademas de su pequenhez, eran de la superficie, la cual ofrece en estos hierros, como se sabe, su estructura muy modificada, y mas atn si los trocitos se extrajeron 4 golpes con un corta-frio, por todo lo cual no constituian ejemplares determinables en realidad. Sin embargo, podia notarse que la estructura no es tan compacta y las caras de corrosi6a tampoco ofrecian el brillo mate particular 6 como barnizado que suele ser caracteristico de las eutaxitas. Disponiendo ahora de mas material y en vista de un anidlisis quimico mds exacto que el realizado primera- mente, no cabe duda de que el ejemplar de Quesa es una octaedrita normal. Debo hacer notar que esel primer caso de hierro metedrico caido en Espana de 218 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA ; en este hierro metedrico la disposicién habitual en el grupo a que pertenece, sino que consiste en bandas finas, de 000,3 mi- limetros de anchura, brillantes, bastante tortuosas, de aspecto de tanita, que destacan algo sobre las caras de corrosidén. Las columnas de tanita presentan notable anchura y los campos estan muy desarrollados, convirtiendo éstos en finos granos de plesita obscura con pequenisimas laminas brillan- tes en la parte central. La composicién de este meteorito hallada por Cohen corres- ponde a una octaedrita normal, y es la siguiente: Fe = 88.73 Ni + Co = 10.85 Pe TOES 99.73 Los escasos y pequenos trocitos de que dispusimos en el primer reconocimiento, debian proceder de la zona superfi- cial, en la cual la estructura y hasta la composicidn difiere de las de la masa general, siendo mas rica aquella que ésta en niquel, lo cual ha explicado Fleitmann por ser este cuerpo mucho menos fugitivo que el hierro. Cohen ha anali- zado 0,16 gr. de la porcién de estructura granuda que supone- mos superficial y ha obtenido, sin embargo, el resultado con- trario, pues le han dado Fe = 95.56 Ni-+ Co= 4.40 100.16 Aun cuando un analisis realizado con tan escaso material no es probable sea completamente exacto, y pudiera en reali- dad ser algo mayor que la consignada la proporcion de niquel, siempre resulta ésta en el caso presente, y contra lo admiti- do, notablemente menor que en la parte no metamorfoseada del meteorito. que se tiene noticia, pues todos los meteoritos del pais que posee nuestro Museo son pétreos. DE HISTORIA NATURAL. 219 SECCION DE ZARAGOZA. Sesi6én del 28 de Junio de 1899. PRESIDENCIA DE DON HILARION JIMENO. Leida el acta de la sesiédn anterior fué aprobada. —Qued6 admitido como socio el Dr. D. Juan Enrique Iran- zo, Catedratico en la Facultad de Medicina de la Universidad, propuesto por el P. Navas. —Hl Sr. Vicioso, de Calatayud, envio la nota siguiente: «Plantas de las inmediaciones de Calatayud. Hace ya muchos anos el distinguido botanico aragonés, D. Francisco Loscos, se propuso estudiar la vegetacidn de esta comarca, segun se desprende de una carta que tengo a la vista fechada el 8 de Febrero de 1863 y dirigida 4 su amigo y cola- borador D. Salvador Calavia, farmacéutico de Aranda de Mon- cayo. No debieran andar muy sobrados de recursos los dos ami- gos, cuando fiaron al azar la realizacién del proyecto. Es el caso que el primero propone al segundo en la citada carta el tomar por cuenta de ambos un billete de loteria de 100 pese- tas para en caso afortunado sufragar los gastos de la expedi- cién. Seguramente que no debid serles muy propicia la for- tuna, quedandose en proyecto el ideado viaje, porque son muy contadas las especies que en la Serie imperfecta de plantas ara- gonesas se citan como propias de esta region, y las que se citan son tnicamente las enumeradas en las obras de Asso. En qué época empecé el estudio de la flora de estas cerca- nias, no puedo precisarlo; pero si aseguraré que mi empresa fué una verdadera temeridad. Sin buenas obras descriptivas; sin un regular microscopio, y, sobre todo, sin relaciones con ningun botinico que me facilitara plantas secas que me pu- dieran servir de comparacién, facil es comprender que no se- rian muchos los progresos que hiciera en mis investigaciones. Sin embargo, después de unos anos, entusiasmado unas veces, desalentado otras ante dificultades para mi insuperables, tuve 220 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA la fortuna de entrar en relaciones botinicas con D. Carlos Pau , farmacéutico de Segorbe, y a tan carinoso y diligente amigo debo, no sélo el haber proseguido con interés este trabajo, sino el poder presentar la siguiente enumeracidn sin los erro- res que indudablemente contendria si yo sdlo hubiera inter- venido en la determinacién de las especies enumeradas. A él son debidos los nombres de un buen niimero de especies cuya determinacién yo no hubiera acertado, y a él se deben tam- bién las notas que ilustran el de no pocas especies curiosas 6 criticas que en mis excursiones he logrado recolectar. (Véanse Actas de la Soc. esp. de Hist. nat., sesidn del 4 de Julio de 1894 y Notas botanicas, fasciculo v1.) Aun cuando muchas veces le he manifestado particular- mente mi agradecimiento, hoy creo un deber hacerlo constar publicamente, sintiendo que la intima amistad que nos une me impida que le tribute todos los elogios que merecen sus inteligentes trabajos en beneficio de la flora de mi pais. Talamifioras. Ranunculaceas. Ranunculus trichophyllus Chaix.—Aguas estancadas del Prado de San Ramon. 19 Octubre 1894. — bulbifer Jord.—Ribazos de Ribota. Mayo 1897. «Los au- tores lo dan por sindnimo del 2. du/bosus L., y este no parece encontrarse en Espana segun Freyn. Esta mis- ma forma abunda en Teruel (Zapater!, Badal!, Bene- dicto!), y no es raro en los montes segorbinos.» (Pau in litt.) — confusus Gr. Godr. var. submersus Freyn. Aguas de la dehesa de San Vicente (Sierra de Vicort). Mayo 1897. Adonis autumnalis L.—Terraplén de la via férrea, junto a la carretera de Paracuellos. Junio 1895. — citrina DC.—Lomas inmediatas 4 Bambola (ruinas de Bilbilis). Abril 1898. Thalictrum tuberosum L.—Dehesa de Val de Vicort. Mayo 1897. Delphinium Loscosii Costa.—Sitios dridos de Campiel, 4 la sa- lida del tunel. Julio 1895. — peregrinum L.—Vinas de Val de Herrera. Junio 1897. DE HISTORIA NATURAL. 221 Cruciferas. Erucastrum incanum Woch. (Stnapis incana L., Hirschfeldia adspressa Moench.)-—Frecuente en los ribazos de la vega. Junio 1896. Brassica Cheiranthus Vill.—Parte superior del Cerro de la Mora (Villalbilla). Rara. Abril 1894. Diplotazxis virgata DC.—Sitios aridos y vinas del camino de Huérmida. Abril 1897. Nasturtium asperum Boiss. —Un solo ejemplar en la arboleda del Recuenco a orillas del Jalon. 23 Abril 1897. Esta y otras plantas raras encontradas a orillas del Jalon provienen sin duda de puntos mas elevados y de semillas depositadas por las inundaciones del rio. Arabis sagittata DC.— Entre Alpartir y Cosuenda (Aguilar). Abril 1895. Moricandia Ramburei DC.—Nueva para Aragon, y con seguri- dad representa la M. arvensis auct. arag. (Pau in litt.) Arenales de Anchada, a orillas del Jalon. Mayo 1896. Cochlearia glastifolia L.—Frecuente en las orillas de las ace- quias. Abril 1895. Thervis amara L..—Muy pocos pies a orillas del Jalon (Anchada). Mayo 1894-95. No ha vuelto a aparecer desde este ul- timo ano, Teesdalia Lepidium DC.—A orillas del Jalén, también en el término de Anchada. Abril 1896. Hutchinsia aragonensis Loscos et Pardo.—Arenales de Ancha- da. Abril 1896. — procumbens Desv.—Al pie de las tapias de los huertos. Julio 1896. Lepidium hirtum DC. var. psilopterum Wk.—Dehesa de Val de Vicort. Mayo 1897. Senebiera Coronopus Poir.—Campos incultos de Cifuentes. Ju- lio 1897. Cistaceas. Cistus albidus L.—Dehesas de la sierra de Vicort. Junio 1894. — laurifolius L.—Sierra de Villarroya, Junio 1893. 222 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Droseraceas. Drosera rotundifolia L.—Lugares acuosos de la sierra de Vi- cort. Junio 1896. Poligalaceas. Polygala monspeliaca ..—Sierra de Vicort (Val de Judios). Ju- nio 1895. — rupestris Pourr.—Montes de Campiel y Villalbilla. Mayo 1897. . Cariofilaceas. Silene arvensis Losc.—Arenales de Anchada y Vinas. Mayo 1894. — legionensis Lag.—Vinas de la Casa de la Vega (inme- diaciones de Cetina). Julio 1898. Valeria vigida L.—Arenales de Anchada. Mayo 1894. Saponaria oficinalis L.—A orillas de una acequia, junto a la carretera de Jarque 4 Aranda. Julio 1894. Spergula pentandra L.—Sierra de Vicort. Abril 1895. Spergularia diandra Heldr.— Eras de la puerta de Zaragoza. Abril 1897. Sagina Reuteri Boiss. var. peduncularis Wk.—A orillas del Ja- lon. 7 Mayo 1896. Mas abundante en los terrenos in- cultos, frente al muelle de la estacion del ferrocarril. Abril 1898. Buffonia tenvifolia L.— Junto 4 las tapias del camino del ce- menterio. Julio 1895. Avrenaria leptoclados Guss.—A orillas del Jalén (Anchada). Mayo 1896. — ciliaris Losc.—Inmediaciones de la casa de la Vega. 3 Julio 1898. Es sumamente parecida a la A. obtusi- flora Kze., de la cual la creo forma. (Pau in litt.) Stellaria media Vill. forma boreana Jord.—Aridos frente 4 la estacion del ferrocarril. Abril 1896. Cerastinm viscosum L.—Arboleda del Recuenco. Mayo 1896. DE HISTORIA NATURAL. 223 Linaceas. Linum angustifolium Huds.—A orillas del Jalon, junto al pon- tazgo. Acequias de Cifuentes. Junio 1897. Es frecuente en las acequias de Miralbueno (Zaragoza). 31 Mayo 1897. — maritinum L.—Prado de San Ramon. Junio 1894, Sep- tiembre 1897. Malvaceas. Malva egyptia L..—Lugares incultos junto al barranco de Val de Arenas. 29 Mayo 1897. — trifida Cass.—Inmediaciones de la Casa de la Vega. 2 Julio 1898. Althea hirsuta L..—Ribazos del término de «Margarita» y pra- do de Cifuentes. Escasa. Mayo 1897. Aceraceas. Acer monspessulanum L.—Montes de Anchis. Abril 1894. Ramnaceas. Rhamnus lycioides L.—Cerro de la Mora (Villalbilla). Abril 1897. Terebintaceas. Rhus Coriaria L.—Vifias de Val de Herrera. Julio 1897. Restos sin duda de antiguos cultivos. Papilionaceas. Genista Scorpius DC.—Comunisima en lugares estériles. Mar- ZO 1897. 224 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA ae Sarothamnus vulgaris Wimm.—Sabinan, en el término de Val- demoro. Septiembre 1897. Muy pasada. Retama spherocarpa Boiss.—Terraplén de la via férrea, junto al puente de Anchada. 14 Junio 1895. Lrinacea pungens Boiss.— Sierra de Vicort. 18 Agosto 1897. Sin fior ni fruto. Ononis Columne A\l.—Arenal de Anchada, a orillas del Jalén. 21 Mayo 1897. — Natrizl. var. aracnoidea Lap.—Montes de Ribota. Ju- lio 1897. Lotus decumbens Poir.—Frecuente en Anchada. Mayo 1897. Dorycnium suffruticosum Vill.—Sierra de Vicort. (Val de Ju- dios.) 23 Junio 1895. Trifolium angustifolium L.—Con la anterior y en los arenales a orillas del rio. 13 Junio 1899. Glycyrrhiza glandulifera W. et K.—Huertos de la puerta de Terrer. Los ejemplares recibidos de la Granja, de Co- cos y de Villalba, pertenecen a la misma especie. Ju- nio 1894. Astragalus stelle Gou.—Terraplén de la via férrea, junto al puente de Anchada. Mayo 1894. — Narbonensis Gou.—Un solo ejemplar a orillas del Jalén. 26 Mayo 1895. No se ha reproducido. — Turolensis Pau.—Raro en los montes de Ribota. 5 Mayo 1897. Nuevo para la provincia de Zaragoza. Onobrychis montana Gaud.—Arenales de Anchada. 18 Mayo 1894. — saxatilis A. DC. var. canescens.—Con la anterior, pero mucho mas abundante. Mayo 1894. Lathyrus sphericus Retz. —Cerro de la Mora (Villalbilla). Ju- nio 1894. — sativus L.—Entre las mieses. 20 Mayo 1897. Vicia purpurascens DC.—Idem. Mayo 1897. — parviflora Cay.—Sierra de Vicort. (Val de Judios.)» DE HISTORIA NATURAL. 285 Sesién del 8 de Noviembre de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. ikl Sr. Secretario did lectura del acta de la sesién anterior, que fué aprobada. —Se hicieron dos propuestas de socio numerario y dos de agregados. —El Sr. Puig participé haber cumplido el encargo que le did la Sociedad haciendo presente al Director general de Instruc- cidn publica las razones por las cuales entendia no deberia suprimirse en el presupuesto futuro la consignacién destinada i. sostener la Estacion de Biologia maritima de Santander. No habiendo dado esta gestidn el resultado apetecido, se acordé hacer otras cerca del senador por la Universidad de Madrid, y presentar una exposicién a las Cortes, caso de que se creyera necesario, expresando los poderosos motivos que a juicio de esta Sociedad aconsejan la conservacién de centro tan impor- tante y Unico en su @énero en nuestro pais. —Hl Sr. Secretario did cuenta de haberse recibido varias cartas de naturalistas extranjeros anunciando el envio de sus publicaciones, y presento las ya recibidas, acordandose hacer constar en las actas el agradecimiento de la Sociedad por la excelente acogida que han dispensado a la circular que se les labia dirigido y por las valiosas é importantes publicaciones con que han enriquecido nuestra biblioteca, y en su conse- cuencia nombrar socios correspondientes extranjeros 4 los se- nores André (Ernesto). Entomdlogo, de la Sociedad entomoldgica de Francia. Gray (Haute Saone), Francia. Bedel (Luis), de Paris, de la Sociedad entomoldgica de Francia. Camerano (Lorenzo), Director del Museo zoologico de Torino. Delgado (J. F. N.), Jefe de la Seccién de los trabajos g@eolé- cicos de Portugal, en Lisboa. Dr. Blanchard (Rafael), Profesor de la Facultad de Medicina de Paris. ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.— NOVIEMBRE, 1899. 13 226 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Dr. Gestro (Rafael), Vicedirector del Museo de Historia na- tural de Génova. Giard (Alfredo), Profesor en la Sorbona. Meunier (Stanislao), Profesor de Geologia en el Museo de Historia natural de Paris. El Sr. Barras comunica desde Palencia que a su regreso después de las vacaciones ha tenido noticia de un temblor de tierra que se sintid en aquella capital préximamente a las dos de la madrugada del 4 de Agosto ultimo. Ha interrogado 4 muchas personas de las que se apercibieron del fendmeno, y calculan en 3.64 segundos su duracion, habiendo producido en varias casas la caida al suelo de algunos objetos. Del suceso did cuenta en aquellos dias la prensa local. El Sr. Rodriguez Mourelo participO que dicho terremoto se sintid el mismo dia en La Toja, donde se hallaba a la sazoén. El Sr. Azpeitia dijo que también lo percibié en dicha locali- dad, y que quizas se relacione con tales fendmenos el hecho de que uno de los manantiales de La Toja haya experimentado aumento de temperatura desde hace algtin tiempo. . —El1 Sr. Calderon did la siguiente nota bibliografica: «Das Huelva-Kiesfeld in Siid-Spanien und dem angrenzenden Theil von Portugal», von Professor J. H. L. Vogt. in Kristiania (Zeitsch. fiir praktische Geol., 1899). El conocido profesor de Cristiania ha tenido la atencién, que le estimamos, de enviarnos un ejemplar de su interesante trabajo de conjunto sobre la regién piritifera de Huelva y su continuacién en Portugal, al que acompanan un plano y cua- tro cortes geoldgicos. Tan reputado g@edlogo ha hecho estudios profundos sobre los yacimientos de dicha substancia de su pais, ha visitado los mas clasicos de Europa, y asi su expe- riencia en el asunto es de inmenso valor por lo tocante 4 las cuestiones que sugiere este incomparable distrito: cuestiones planteadas las mais con notable acierto por el reputado inge- niero Sr. Gonzalo Tarin y por otros observadores anteriores y posteriores 4 él, y resueltas algunas de diversos modos. Hmpieza el autor por dar una idea de la extension y distri- hucién de la zona piritifera, abarcando no solo la de Huelva, ya bien definida por Gonzalo Tarin, sino su prolongacidn.al O. en la masa principal de San Domingo en Portugal. DE HISTORIA NATURAL. 227 Pasa después a tratar de la geologia del distrito minero, si- guiendo al citado ingeniero espanol, si bien afirma, de acuer- «lo con Klockmann, que no puede probarse falte en él el devé- nico, y que lo probable es que se encuentre alli la serie com— pleta paleozoica, empezando por el siltrico y siguiendo el de- vonico y el culm. Nota el caracter fititico de las pizarras de la region muy metamorfoseadas vy con hojosidad transversal. Menciona des- pués las rocas eruptivas de la zona piritifera, que son, see@tin Gonzalo Tarin, de naturaleza intrusiva, al paso que para Klockmann forman lechos concordantes con las pizarras y en muchos sitios deben considerarse como sedimentos tobaceos. Kl profesor Vogt, aun declarando que su visita fué demasiado corta para dar opiniones definitivas, se inclina 4 la primera, y cita que la roca de los montes situados entre San Dionisio vy el N. de Rio Tinto no es realmente una toba, sino una bre- cha moderna. Ademas se explicaria mal, en el supuesto de Klockmann, que dichas rocas eruptivas (tanto acidas como basicas) se encontraran con igual abundancia entre las capas siluricas que en las del culm. Los depositos de pirita son lenticulares, alcanzando una asombrosa anchura (hasta de 150 m.), y dicha forma es len- ticular, no sdlo en el sentido horizontal, sino en el vertical. Ks de notar que, en oposicion 4 lo generalmente conocido en otras regiones, la pirita de Huelva se distingue por una estruc- tura completamente maciza, sin senales de bandas 6 de hojas. Hay excepciones a esta regla en minas que ofrecen una pirita enteramente semejante a la de Ramelsberg en el Harz, y es porque se han formado como ella. La analogia del yacimiento de Huelva con los grandes de otras regiones hace pensar en la comunidad de origen y de problemas genéticos de todo el grupo piritifero (Kiesgruppe) del mundo entero. Los gedlogos espanoles, y tambien de Launay, creen que la formaciodn de Rio Tinto es obra de tres procesos: plegamiento de todo el complejo de pizarras, erupcidn de rocas porfiricas V periodo de las minas, todos ellos intimamente ligados entre sf. Mas F. Romer, y mas tarde Klockmann, participan de la opi- nion del origen sedimentario de las piritas en un periodo en- lazado con la erupcién de los porfidos. Contra semejante ori- 228 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA wen opone Vogt el hecho de la identidad de las formaciones de pirita que arman en el silttrico y en el culm, lo que haria pensar que en tiempos tan enormemente alejados habrian de perseverar 6 reproducirse las mismas condiciones. De otra parte, es de notar lo fuertemente impregnados de pirita que se hallan los pérfidos inmediatos 4 ciertos filones, y rebate el supuesto de que esto quisiera explicarse como un resultado de transporte. La configuracién externa de las masas de sul- furo en lentejones irregulares 6 s/ocks no es favorable a la idea de un origen sedimentario, ademas de otras razones en que no podemos entrar aqui por temor de extendernos demasiado. Otro capitulo del trabajo que examinamos esta consagrado & la forma y dimensiones de las formaciones de pirita de la region, sobre las terminaciones en cuna del mineral en la pro- fundidad y la cantidad actual de él. Con este objeto da las ci- fras de la anchura, espesor maximo, seccidn, area y pozos mas profundos que se conocen de varias minas, y perfiles muy in- teresantes de varios criaderos de Rio Tinto y San Domingo, sirviéndose de datos ya conocidos y de sus propias observacio- nes. Por lo general todos terminan en cuna 6 escasa profundi- dad; sélo el de San Dionisio, en Rio Tinto, que es el mayor que se conoce en el mundo, se ha seguido en un pozo hasta una profundidad de unos 400 m. El calculo de la masa de pirita que existe en la zona se funda en el dato de su area transversal y en el de la profundidad, puesto que por metro ciibico hay alli unas 4% toneladas de mineral. Este método da, sin embargo, un resultado superior ‘la realidad, por cuanto los depdsitos terminan, como queda dicho, en forma lenticular. También hay que tener en cuenta para el calculo del contenids de cobre de las piritas que su ley va disminuyendo con la profundidad; asi es que daban en pro- porcién mucho mas cobre que hoy cuando explotaba las minas de Rio Tinto nuestro Gobierno. Calculando aproximadamente la cantidad de mineral extrai- da y la actual, reconstruye el autor la que existia primordial- mente en el distrito de Huelva con estas cifras : Rio Tinto unos 175 4 200 millones de toneladas. Tharsis 30a 35 — a (?) San Domingo 154 20 = — DE HISTORIA NATURAL. 229 De las restantes minas ninguna ha debido pasar de 10 mi- llones de toneladas, y las mas sélo habran llegado a 5. En total, y prescindiendo de muchas impugnaciones de menos impor- tancia, da unos 350 a 400 millones de toneladas. Unido ésto 4 la cantidad mucho mayor dispersa en forma no explotable en las rocas vecinas y a los depdsitos que debe haber 4 mayor profundidad (que en otro trabajo estimaba el autor en con- junto en 1.000 millones de toneladas), suscita el problema geo- logico, alin no resuelto, de como explicar la concentracién de esta cantidad colosal de azufre, hierro, cobre, arsénico y otros cuerpos que se hallan en las menas de la regién. Pasa el autor a tratar de la composicién de las piritas y espe- cialmente de su ley segun la profundidad. En esta parte no anade nada nuevoa lo que ya sabemos por los analisis que de ellas se han hecho. Entre los elementos accesorios recuerda la plata por unos 25 a 30 gr. por tonelada y aleunas milésimas de oro. Para expresar graficamente el decrecimiento de la ley de cobre segun la profundidad, se sirve de una seccién verti- cal de la mina San Domingo, que contiene de 445 por 100 hasta los 40 m., el 2 hasta los 80, el 1.5 hasta los 100, el 1 hasta los 140, y después se ignora ya la ley, citando otros ejemplos de analogo decrecimiento. La montera de hiervo es después objeto de algunas conside- raciones, especialmente una zona aurifera y argentifera de uno 6 varios decimetros que hay entre dicha montera y la pirita subyacente, la cual ha llamado modernamente la aten- cidn y es objeto de una explotacion cuidadosa. La oxidacion de la pirita explica, al mismo tiempo que la desaparicién del cobre transformado en sulfato soluble por la accién de los agentes geoldgicos, la concentracién de aquellos metales que se encuentran en pequena cantidad en las piritas normales. También se encuentra a veces cerca de la zona metalifera azu- fre nativo, cuyo origen se explica como el producido por la elec- trolisis del cobre en el método de Siemens-Halske, por la fér- mula Cu2 S + 2 Fe? (S04 = 2Cu Soi +4 Fe SO'+ 8. #n otro capitulo recopila el autor la historia de la explota— cidn del gran yacimiento espanol, la cual esta probado se re- monta por lo menos a los fenicios, once siglos antes de J. C., 230 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA y quizas lo hicieron antes otros pueblos primitivos. Los roma- nos explotaron en prodigiosa escala la masa de Huelva, lle— wando a una profundidad de 100 4 125 m., extendiendo sus evalerias en un radio calculado nada menos que en 300 km. Es asombrosa la cantidad de cobre extraida durante un periodo de ocho siglos; pero no entraremos en estos datos que se con- signan en la bien conocida memoria del Sr. Gonzalo Tarin. En la estadistica Ultima de la casa Merton, de 1897, figura la produccién de cobre en Espana y Portugal con las siguientes cifras en toneladas inglesas: BGS LD LG esate es Ns eee eae orale 33.900 PRINAESIS SAaie eek s ioe ttre tpt tae 12.000 San Domimg@o.2.. 2.2%, se awen 4.300 Seyi bas 42 os ea ages Riera slo ORPAS MINAS ve aon kee eevee. 3.050 24.060 Esta considerable produccién aun fué excedida en 1895, y sobre todo en el 92, en que lle@é 4 56.492. En los ultimos diez anos el distrito de Huelva viene produciendo del 13 al 23 por 100 del total de cobre que se obtiene en el mundo entero. La produccién del cobre se halla al parecer en su punto cul- minante en la regién espanola, y aun podra sostenerse un par de siglos, después de los cuales comenzara su decadencia, por- que la pirita decrece en profundidad, pierde su ley de cobre, al paso que aumenta el costo de la extraccién. Termina Vogt con alwunas consideraciones industriales y econémicas intere- santes, pero de que prescindimos por su caracter de aplica— cién, terminando aqui esta quizas demasiado larga nota, que bastara para poner de relieve el complejo é interesante con- junto de cuestiones que suscita el estudio de un distrito de tan incomparable importancia como lo es el de Huelva.» SECCION DE SEVILLA. Sesion del 29 de Junio de 1899. PRESIDENCIA DE DON MANUEL MEDINA. —Se did lectura al acta de la sesién anterior, que fué apro- bada. DE HISTORIA NATURAL. 231 —Los Sres. Relimpio y Chaves presentaron la nota que sigue: «Estudio del espectro de absorcion de la sal azul de Villarrubia de Santiago. Las observaciones hechas por los Sres. Calderon (1) y Cha- ves (2) a proposito de la materia colorante de la sal azul de Villarrubia de Santiago han despertado en nosotros el deseo de estudiar el espectro de absorcién de esta curiosa substan- cia, en la esperanza de encontrar algtin nuevo caracter 6 dato capaz de esclarecer 6 precisar su naturaleza. A este fin, y no poseyendo cantidad suficiente de substancia para obtener una disolucién bastante concentrada de dicha materia, hemos comenzado por preparar una lamina obtenida por exfoliacion de la sal, que, encerrada entre dos cubre-objetos unidos por medio de balsamo del Canada, ha permitido observaciones interesantes, de las cuales damus cuenta a la Sociedad en esta nota. Bajo un espesor de 6 mm., el espectro muestra desde luego la desaparicién de las longitudes de onda correspondientes a la regidn del anaranjado y del amarillo, sin dejar percibir cla- ramente la banda de absorcién que se acusa de una manera notable bajo un espesor doble, esto es, de 12 mm. En estas tltimas condiciones parece reducirse ligeramente la region del rojo, y es bastante perceptible la absorcién gradual a par- tir del indigo, sin que sea posible, al espesor indicado, el esta- blecer ésta de una manera tan terminante, como sucede con la banda mencionada. ¢ D En la figura adjunta se representa la posicién de esta banda que se extiende por igual a la derecha y a la izquierda de D, (1) ANALES DE LA SOC. ESP. DE HIST. NaT., tomo xxv. Actas, pag. 18. (2) Contribuciones mineralogicas. Notas presentadas « esta Sociedad en la sesidn de Diciembre de 1898. 232 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA es decir, de la raya amarilla del sodio. La intensidad de la absorcidn es algo mayor hacia C que hacia #. Adoptando la notacién empleada por Vierordt, la posicién y extensién de la banda quedaria fijada por C 670 D — D 263 E es decir. que esta’ comprendida entre las longitudes de onda 5972 y 608. Con objeto de precisar nuestras observaciones respecto a la absorcion en las otras regiones del espectro, hemos examinado i través de nuestra preparacién los espectros de emisién de determinadas substancias bien caracterizadas. La raya azul del estroncio desaparece; las rayas verdes del cobre han sido vistas pocas veces entre numerosas observaciones, y siempre bastante atenuadas. Desde luego convenimos en que estas iltimas observaciones carecen de la precisidn y el valor que alecanzarian tratandose de un ejemplar mas coloreado suscep- tible de ser examinado en lamina mas delgada para evitar la wbsorcion general independiente de la materia colorante. Para ponernos 4 cubierto de un error posible hemos hecho el examen de una placa de balsamo del Canada resinificado, dispuesta entre dos laminas de vidrio y de un espesor mayor que la interpuesta en nuestra preparacién de sal. En estas condiciones no hay absorcién sensible. Kl estudio comparativo de los espectros producidos por vi- drios de cobalto de diferente intensidad muestra un desacuer- do completo con el que ofrece la sal azul de Villarrubia de Santiago, y en el mismo caso se hallan las disoluciones diluida y concentrada de sulfato cuprico y de cloruro de cobalto aci- dulada por el clorhidrico en diferentes diluciones. Pero, en cambio, es notable la semejanza con el espectro producido por el ioduro de almidén. Las disoluciones diluidas y concentra— das de este cuerpo han sido obtenidas anadiendo tintura alco- hélica de iodo 4 la solucién acuosa de almidon.» Sesi6én del 8 de Septiembre de 1899. PRESIDENCIA DE DON MANUEL DE PAUL. Leyése y fué aprobada el acta de la anterior. —Se did lectura 4 continuacién de la siguiente nota de los Sres. Relimpio y Chaves: DE HISTORIA NATURAL. 233 «Estudio de los espectros de absorcion de algunos minerales coloreados. Investigaciones emprendidas por el Sr. Chaves acerca de la naturaleza de las materias colorantes del cuarzo, de la sal oema y algunos otros minerales, nos han sugerido la idea de efectuar una serie de observaciones relativas a los espectros de absorcién de las variadisimas substancias pigmentarias que los minerales ofrecen, confiando en que, sin duda alguna, el estudio de los correspondientes espectros arrojara alguna luz respecto @ la naturaleza de dichas substancias, acerca de la cual se han emitido ya, en casos particulares, tan diversas y contrarias hipotesis. No sabemos que hasta hoy se hayan emprendido por los mineralogistas las investigaciones que nos ocupan, 4 lo me- nos con el caracter de generalidad que pretendemos darles. En las discusiones suscitadas respecto 4 la causa del color de algunas variedades 6 especies mineraldgicas, y aun en traba- jos de conjunto de esta cuestién, rara vez se hace mérito de los espectros de absorcién, dejando el campo libre de ordina- rio a las observaciones y datos quimicos de caracter analitico. Nosotros creemos que el estudio que nos ocupa puede ser provechoso, sobre todo tratandose de casos en que las conclu- siones de orden quimico se complican con la desaparicién de las coloraciones por disolucién 6 ataque. El breve estudio de que 4 continuacién damos cuenta, ha sido ejecutado con un espectroscopio de Kirchotff y Bunsen, modelo corriente de catedra, y en todas nuestras observacio- nes nos hemos valido de la luz de una lampara de gas Argand. La primera de estas observaciones, relativa 4 la sal azul de Villarrubia de Santiago ha sido comunicada @ la Sociedad. Los datos numéricos aqui consignados expresan las divisio- nes de la escala del espectroscopio empleado en que aparecen las bandas de absorcidn. La raya D se pinta en el nim. 50 de esta escala, y la azul del estroncio en el 104. I. Blenda acaramelada de los Picos de Huropa.—a. KWjyem- plar limpido uniformemente coloreado en melado palido. Es- pesor, 10 mm. El espectro se debilita gradualmente @ partir de la region verde, notandose bien la absorcién en el azul, indigo y violado. 234 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA 4. Kjemplar de coloracién muy intensa, algo variada en tonos melados rojizos. Espesor, 33 mm. El espectro de absor- cidn se acusa mas que en el ejemplar anterior. Desaparecen todas las longitudes de onda, 4 excepcién de las comprendidas entre las divisiones 30 y 60. Il. Cuarzo negro de Villasbuenas (Salamanca).—La prepa- racién se ha obtenido tallando paralelamente al prisma un grueso cristal negro, opaco. Espesor, 5mm. Espectro seme- jante a J, a. Il. Hsparraguina de Vera (Almeria).—Ejemplares descritos recientemente en las Actas de esta Sociedad (ANALES t. XXVII, Actas, pag. 69). Espesor, 7 mm. El espectro ofrece tres bandas de absorcién. La primera, mas ancha, comprende desde la divisién 49 a la 54, y ofrece regiones de intensidad diferentes; comenzando de. izquierda a derecha, esta disfumada entre las divisiones 49-49,5. Se acusa después una fuerte sombra en- tre 49,5-52, después se debilita rapidamente hasta 53 y vuelve a’ acentuarse del 53-54. La segunda de las bandas es unifor- me, y ocupa la posicién 68,5-71. La tercera banda es muy fina, ocupando menos de media divisién. Aparece en la 75. Este espectro es semejante al que da una disolucién acuosa de acido picrico, de analoga tinta que la esparraguina em- pleada. Sesi6én del 22 de Octubre de 1899. PRESIDENCIA DE DON MANUEL DE PAUL, Se leyé y fué aprobada el acta de la sesién anterior. Se acorddéd enviar algunas de las circulares impresas a per- sonas que pudieran tener interés en pertenecer a la Sociedad. —El Sr. Medina indico que tenia noticia de que en la Puebla de los Infantes habia un yacimiento de fosfato de cal con una eran abundancia de huesos de mamiferos diversos, sehalando la conveniencia de adquirir ejemplares por los senores socios que tengan relaciones en la localidad antes de que la explota- cidn que se practica en dicho yacimiento los haga desaparecer. —Ilil Sr. Chaves ley6 la siguiente nota: «Cerusita de La Aliseda (Jaén). Los cristales de cerusita de cuyo estudio doy cuenta en esta breve nota han sido recogidos por el Sr. D. Carlos del Rio en DE HISTORIA NATURAL. pra) la mina «La Rosita», de La Aliseda. Forman geodas en una masa constituida por una mezcla de galena, cerusita cristalina con algo de anglesita y ganga cuarzosa. Al separar los crista- les, escasos y desigualmente desarrollados, con un buril, solo he podido obtener fragmentos cuyas formas han sido deduci- das por comparacién de las medidas goniométricas halladas con las de ejemplares de diversas localidades. Los cristales a que me refiero son incoloros y totalmente solubles en el acido nitrico diluido, dejando 4 veces un residuo debido a las inelu- siones de g@alena. He observado en ellos las formas #5 (111) y wm (110), y tengo por dudosas la 4! (112) y otras. Las medidas que he obtenido son las siguientes: DESDE Se oc ch poiske hates VSO fees Des Cloizeaux da 129° 40° (Man. de Min. ) Dabo a. preset ea elo eat) Seguin Des Cloizeaux (ib.) es de 144° 15’. da 144° 14’. : BLIND: (Beenie. oe cae a0 GEIR CG): oe a eign oe oO E OU. Kkokscharow (ib.) Existen también en los ejemplares de La Aliseda maclas que no me ha sido posible determinar con seguridad.» SECCION DE ZARAGOZA. Sesi6én del 25 de Septiembre de 1899. PRESIDENCIA DE DON PATRICIO BOROBILO, Fué leida y aprobada el acta de la sesiOén anterior. —Kl Sr. Presidente diéd cuenta del fallecimiento de D. Fru- tos Gila, padre de nuestro companero D. Félix, y se acordo hacer constar en el acta el sentimiento con que se recibid la noticia de la desgracia de nuestro companero. —K1 R. P. Navas leyo las siguientes «Notas entomologicas. ite IN ORTOPTERO NUEVO. Pycnogaster brevipes mn. Statura majore, wneo-fuscus, nitidus. Pronotum margine 2335 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA antico late sinuato, margine postico angulo obtuso triangula- riter emarginato, costis subrectis, antice et postice subweque distantibus, a sulco primo solo interruptis, lobis deflexis an- tice quam postice subaltioribus, angulo antico recto, postico late rotundato. Elytra parum prominentia, fusco-ferruginea, postice pallidiora, campo marginali, haud areolato. Abdomen pronoto obscurius, singulis segmentis fascia postica lata ru- gulosa nitidioreque. Pedes grisei, breves, femora crassa, tibize subtetragone. Femora postica basi et apice crassiora, subtus inermia. Tibize anticee foramine tympanico flexuoso, sigmoi- deo, postica supra tote sulcate, in margine externo 3-6, ple- rumque 5-spinulosxe, in interno 6-8, plerumque 7-spinulose. co Segmentum anale transversum, angustum, postice late impressum, subemarginatum. Lamina supraanalis elongata, triangularis, lateribus dilatatis, apice rotundato. Cerci breves, conici, ante medium dente interno armati. Lamina subgeni- talis transversa, tenuis, medio carinata, postice emarginata (Thora 2 Lamina subgenitalis transversa, medio carinata. postice emarginata. Ovipositor rectus duplicem pronoti longitudinem modice superans (fig. 2.*). Species affinis P. Bolivavi Brunn., a qua differt: 1° colore obscuriore et longe nitidiore; 2.° pedibus brevioribus crassio- ribusque in utroque sexu; 3.° ovipositore multo breviore. Habitat in monte Cauno, ad ejus clivos meridionales in Aragonia, in Junipero communi L., quo alitur. Longitudo corporis (in vivo) ¢7 38mm. 9 42 mm. --- pronoti medio 10 1] --- fem. postic. 13-14.5 15,5 — ovipositoris. 25 27 — antennarum. 20 24 Ks esta especie muy afin al 2. Bolivar? Brunn., del que a primera vista apenas se distingue. Bastardn, sin embargo, a diferenciarla desde luego el color bronceado parduzco y lustre bastante intenso, la brevedad de todas las patas eu ambos sexos y en la Q la poca longitud del oviscapto. Para mas perfecta distincién de ambas especies apuntaré algunas otras diferencias, comparando la presente con el P. Bolivari. Las antenas son mucho mas cortas, pues doblandolas sobre Di HISTORIA NATURAL. 237 el dorso Hegan tan sdlo a la base del abdomen, no pasando del segundo segmento; enel P. Bo- /ivari Negan por lo menos al cuarto € f segemento. Kl pronoto ofrece el borde ante- rior mas curvo, adelantandose con- siguientemente los angulos latera— les por encima. Los surcos trans- on LC % versales soh mas vagos y menos bien limitados, mas anchos y me- nos profundos. Las quillas laterales tienden al paralelismo, acercando- se 4 las veces por delante un tanto, lo cual sucede con mas frecuencia y mas marcadamente con el P. Bo- livari. Los lobulos laterales son casi igualmente anchos por delante y por detras, siendo algo mayor la altura por la parte anterior. El an- gulo posterior del mismo presenta una curvatura de mucho mayor radio. Fig. MiSs sv Todas las patas son visiblemente mas cortas, asi fémures como tibias, especialmente las intermedias y posteriores. La abertura timpanica, de bordes casi paralelos, con ligero en- sanchamiento en la base, presenta una doble curvatura en Fig. 2.4 Q direccién opuesta, siendo mas acentuada en su segunda parte que en la primera, 6 lo que es lo mismo, es sigmoidea, al paso que la curvatura es sencilla, de aspecto reniforme en el P. Bo- liwars. 238 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA El numero de espinas de los bordes superiores de las tibias posteriores es bastante variable en la presente especie, asi de un individuo 4 otro, como de la tibia izquierda 4 la derecha, si bien lo general es poseer cinco el borde externo y el inter- no siete, nlimeros que son mucho mas constantes en las QO © que en los po”. También puede observarse que en las mismas iibias es mayor en la derecha que en la izquierda, especial- mente por lo que al borde interno se refiere. El color ofrece, asimismo, alguna variedad. En ale@unos ejemplares el disco del pronoto es posteriormente de color leonado. Los cercos del <7 son las mas veces pardo-amarillen- tos y con menos frecuencia del tinte general del cuerpo. El diente interno viene a caer a la mitad del cerco, donde éste ofrece una dilatacién; y a la vez que se adelgaza para termi- nar en punta, encdrvase hacia el abdomen y hacia abajo. Su estridulacion es tan caracteristica, que no puede confun- dirse con la de otro ortéptero. Es muy sostenida y aguda, aunque poco intensa. De cerca, y atendiendo con cuidado, se percibe en ella un doble sonido: el uno continuo, parecido a la estridulacién de la Locusta viridissima L., pero mas agulo, débil, dulce y pausado el otro, interrumpido 6 como a golpes, mucho mas grave; el primero es, por decirlo asi, metalico; el segundo semejante al sonido de castanuelas. Prodticela de ordinario solamente, como es sabido, el macho, sin embargo de que la emite a veces mas breve 6 interrumpida la 9 al huir para no ser cogida. He hallado esta especie en las vertientes meridionales del Moncayo que miran a Castilla en los confines de Aragon. En los tres alos 1896, 1898 y 1899 he observado que ha adelantado en el mismo monte hacia el E., como 3 km. ep linea recta, siguiendo las matas de enebro que se ven en aquella parte achaparradas, ocupando algunos metros de extensidn con pocos decimetros de altura, Parece se alimenta exclusivamente de esta planta, que la ha comido bien en cautividad, si bien lo he visto alguna vez cantar en un pie de #7ica que alli suele alternar con el enebro. No es nada facil su captura, no sdlo por hallarse tan lejos de poblado en las alturas del Moncayo a mas de 1.200 m., pero también porque hallandose entre extensas matas del enebro, donde se ocultan acaso las 9 9 y oyéndose la estridulacién de DE HISTORIA NATURAL. 239 muchos ¢/ ¢7 a la vez, cesa al instante al acercarse alguien al sitio de donde’ parece procedia aquélla; dandose el caso de dejarse caer el Pycnogaster del lugar en que cantaba a lo in- terior del enebro al sentirse descubierto. Ademas de que en dias en que el calor no es intenso 6 sopla viento fresco, no se atreve el Pycnogaster a salir al exterior, oyéndose la estridu- lacién en el suelo, debajo de las espesas ramas del enebro, que le defienden del frio. Por lo demas, visto una vez el Pyc- nogaster, es facilisimo el cogerlo, pues su excesiva obesidad le impide saltar, con ser Locustido, y aun andar aprisa. Se encuentra adulto en Agosto.» —Kl] Sr. Pardina presento la nota siguiente : «Componente horizontal magnetica de ta Tierra en Zaragoza en 1.° dé Mayo de 1899: Dedicado por mera aficidn 4 trabajos de Mecanica electro- magnética, tuve necesidad de conocer la componente horizon- tal magnética de la Tierra en Zaragoza, elemento el mas im- portante bajo el punto de vista de aquella ciencia entre los cinco principales del magnetismo terrestre. Por referencias autorizadas supe que el sabio aleman senor Lamont habia encontrado en 1&57 por valor de la componente horizontal de Zaragoza 0,21459 c. g@. s. con un aumento anual de 0,00022 c. g. s. Tal aumento me parecidO muy pequeno, pues sabido es que i mayor latitud geografica menor componente horizontal; asi es que si se compara la componente de Zaragona, cuya pobla- cién esta situada a 41° 38’ latitud, con la de Perpignan, por ejemplo, distante del Ecuador 42° 42’ 8”, la de esta Ultima loca- lidad debe ser menor que la de Zaragoza, y por lo tanto el au- mento anual para la componente de esta ultima poblacién debe ser mayor que la de Perpignan, que es 0,00025, 6 por lo menos igual: pues de otro modo, anadiendo 0,00022 cada ano al valor de la de Zaragoza, llegaria con el tiempo a aparecer éste al observador menor que el de la de Perpignan, lo que realmente no puede suceder. Por calculos y comparaciones llegué también, ademas, a comprender que la componente hallada por el Sr. Laraont era inexacta aun aplicandole mayor crecimiento anual que el se- 240 ACTAS DE LA SOCIKDAD ESPANOLA halado por el mismo sabio. No sé tampoco que después de este eminente fisico haya sido encontrada por otro. Estas conzideraciones me indujeron a proceder experimen— talmente, con objeto de hallar el verdadero valor de dicha fuerza; mas no disponiendo para ello de los aparatos usuales, me decidi A adquirir un iman recto de momento magneético, perfectamente determinado y construido con todas las precau- ciones para la couservacién de su magnetismo, valiéndome también para contar las pequenas oscilaciones del iman sus-— pendido por su centro de gravedad de un contador de segun- dos fijos independientes; y hé aqui los experimentos y calceu- los por mi efectuados: ABRZVIATURAS EMPLEADAS. DATOS. 7.—Longitud de la barra del iman. L.— 7,9 cénts. P.—Peso de la barra. P.— 4,421 gramos. R.— Radio de la barra, M.—Momento magnético de la barra. k.—Momento de inercia de la barra ec. gs. ¢.—Duracidn de una pequena oscilacion| de la barra suspendida por su cen- tro de gravedad. H.—Componente horizontal magnetica. i ve —— M.—402,753 R.— 0,15 cénts. Solucion. — 3,15" — 12 = 9,92225 — hk? = 9,869588 ee) - pee (7.92 0,152 — See hh es A eee — 9] .996368 ¢. &. s. hk P(5 tz) 4421 (So 4+ ) 1.996368 ¢. 2 | kh h2 kh 9.869588 & 91.996368 t= kN COT ee ee YN Ree oem tN wan Ce 992225 pane M H = 402,753 x H = 91,505579 99 ~~ ff = 0 Zaragoza en 1.° de Mayo d 72 Componente horizontal magnética de la Tierra en e 1899. DE HISTORIA NATURAL. 241 Sesion del 6 de Diciembre de 1899. PRESIDENCIA DE DON PRIMITIVO ARTIGAS. —Se leyo y aprobo el acta de la sesion anterior. —()uedaron admitidos como socios numerarios Silva Tavares (Excmo. Sr. D. Joaquin de), Profesor en el Colegio de 8. Fiel de Portugal, presentado por el R. P. Pantel: Tarazona y Blanch (D. Ignacio), Catedratico de la Facul- tad de Ciencias de la Universidad de Barcelona, presentado por D. Odén de Buen; y como agregados Escribano y Ramon de Moncada (D. Francisco), Licenciado en Medicina, y Gutiérrez Prieto (D. Jacinto), Licenciado en Medicina. presentados por D. Francisco Angulo. —Se hicieron dos nuevas propuestas de socios. —Kl Sr. Presidente did cuenta del fallecimiento de dos anti- euos y meritisimos socios, D. Tomas Andrés y Montalvo, Di- rector del Museo de Ciencias naturales, y D. Federico Botella y de Hornos, Inspector general del Cuerpo de Minas, haciendo un sentido elogio de sus méritos, acordandose hacer constar en el acta el sentimiento con que la Sociedad habia sabido tan tristes nuevas. . —Kl Sr. Secretario did cuenta de las siguientes comunica- ciones Ultimamente recibidas : Del Sr. J. Richard, Secretario de S. A. S. el Principe de Mdé- naco, dando gracias en nombre de éste por su nombramiento de socio protector y anunciando el envio de varias de sus pu- blicaciones sobre crustaceos inferiores; Del Sr. F. Piccioli, Director del Instituto forestal de Vallom- brosa (Florencia). anunciando el envio de varias de sus publi- caciones y de las del Sr. Lud. Piccioli, y ofreciendo remitir las que en lo sucesivo publiquen; ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.— DICIEMBRE, IS99. 16 242 ACTAS DE LA SOCITEDAD ESPANOLA Del Sr. S. H. Scudder, de Boston, enviando a la Sociedad una numerosa 6 importante coleccién de sus publicaciones ; Del Dr. G. v. Horwath, Director del Museo nacional de Hun- eria, anunciando el envio de sus publicaciones; Del Sr. W. H. Turnez, de la Comision geolégica de los Msta- dos-Unidos, enviando varios de sus valiosos trabajos para la biblioteca de la Sociedad: Del Sr. Montandon (A. L.), de Bucarest-Filaret, noticiando el envio de tiradas aparte de sus publicaciones entomoldgicas, que componen unos 50 trabajos, y ofreciendo remitir las que tiene en prensa y las que publique en lo futuro: Del Sr. Chevreux (E.), de Bone (Argelia), acusando recibo a la circular y anunciando el envio de los ejemplares de que dispone de sus publicaciones y de las de algunos naturalistas amigos suyos, referentes 4 los viajes de su yacht JMJe/i/a, pro- metiendo ademas donarnos una Memoria mas completa ¢ im- portante que esta en publicacion;: Del Director del Museo de Ja Plata, avisando el envio del cuaderno 1.° de la Revista, tomo Ix; Del Sr. D. Maximino Teijeiro, Rector de la Universidad de Santiago, el cual remite seis ejemplares de su obra La Tera- peutica que se impone, autorizando al Secretario de esta Socie- dad, en testimonio de ia consideracién que ella le merece, para que los distribuya como quiera entre sus socios; Del Sr. D. Rafael Tarin y Juaneda, Profesor auxiliar del Ins- tituto de Castellon, y de D. Luis Gimier, Licenciado en Cien- cias naturales, dando gracias por su admision. Se acordé nombrar socios correspondientes extranjeros a los que nos han honrado enviandonos sus valiosos trabajos, y co- municar al Sr. Teijeiro la gratitud de esta Sociedad por su de- licada atencion. —Didse después lectura de una comunicacion enviada por ln Real Academia de la Historia al Sr. D. Manuel Anton, como Presidente que fué de esta Sociedad, dando cuenta de que ha- biendo cesado la suseripcién que se abrié 4 favor de la Viuda & hijos del Sr. D. Marcos Jiménez de la Espada, que ha alcan- zado la suma de 11.642 pesetas, y manifestandole que aunque es posible produzca todavia resultado en alguna de las Repu- hbliecas de América, entiende aquella sabia corporacidn que es egada la oportunidad de hacer entrega de lo recaudado a la DE HISTORIA NATURAL. 243 expresada familia, a reserva de hacerlo mas tarde con otras rantidades, si llevan a realizarse. Quedd acordado que nuestro actual Presidente conteste a dicha comunicacidn, y que lo haga aprobando en un todo lo propuesto por la Real Academia de la Historia. —Kl Sr. Presidente participé la buena y deferente acogida que en la Comision de Presupuestos habia merecido nuestra Sociedad en sus gestiones encaminadas a la conservacién de la Estacién de Biologia maritima de Santander, debiendo en su concepto darse las gracias 4 los senadores Sres. San Martin y Calleja, que se sirvieron tomar nuestra representacion, y al diputado Sr. Cedrtin, que se brindé a hablar en las Cortes a favor de aquel Centro, en caso de que no diera resultado la eestion antes indicada. Asi fué acordado. —KEl Sr. Pau, de Segorbe, remite la nota siguiente: «La flora de Galicia y el Rdo. P. Merino. Si Espana contara con unos cuantos colectores como el Rdo. P. Merino, seria tan conocida su flora como la de la Europa Central; y este conocimiento seria tan completo como pudiera desearse, pues no se me ha presentado ningun pro- blema que haya dejado de resolver por falta de materiales. Escrupuloso y atento, ha recogido dicho naturalista los ejem- plares una y mil veces hasta presentar las formas pertene- cientes 4 especies dudosas 6 criticas en las condiciones de satisfacer los mas exigentes deseos. Llevado del amor a la ver- dad ha repartido sus recolecciones con una liberalidad 4 que no estamos acostumbrados. Sin recelos ni temores, sin falsa vanidad 6 amor propio, sin prevencion alguna ni miedo a ser juzgado, comunica sus creaciones, conocedor del inconve- niente que trae el aislamiento. No ignora que el campo de la ciencia es tan vasto que cabemos en él holgadamente todos; y en su consecuencia, ha procurado aumentar sus relaciones, dando 4 repartir, por medio de algunos amigos, sus plantas; y en verdad que a veces no se le ha hecho justicia, omitiendo su nombre en algunas etiquetas. Recientemente ha publicado en los ANALES de nuestra So- ciedad un Suplemento 77, y el ano anterior did a luz el Suple- mento I de la obra Contribucion a la flora de Galicia. Resulta de los trabajos citados que el P. Merino, merced unicamente 244 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA ‘A sus desvelos, ha recogido en Galicia, contando los hallazgos de este verano, que motivaron otro suplemento, 200 especies mas que las descritas por Planellas y cuantos le auxiliaron, que no fueron pocos en Galicia. (L6pez Seoane, Bosqguejo his- tovico, pag. 17.) Numerosas son las espanolas que hasta el dia no se daban como g@alle@as y no pocas las descubiertas por el P. Merino que no se admitian en la flora espanola. Basta indicar unica- mente las siguientes, que constan en mi herbario, por no quitar novedad al Suplemento II, y dejando al autor las con- sideraciones que estos descubrimientos le sugieran. Han sido indicadas en el Sup/. J las especies: Linderida pyzi- daria A\l., Endymion patulus Gr. Godr., Ulex micranthus Lee. y Juncus heterophyllus Desf. Quedan sin indicar: Armeria Lai- geana Henr. (non A. Langei Boiss.), A. elongata Hottm.. Sene- cio hydrophilus H. L. y Dianthus graniticus Jord. La A. elongata fué citada por los autores espanoles, pero falsamente, puesto que no se encuentra en el centro de la Pe- ninsula. Willkomm sospechaba si podian hacer referencia es- tas equivocadas indicaciones a la A. cantabrica Bss. et Rt. Ms probable, y también el que sea ésto aplicable a la A. planta- ginea W. El Senecio hydrophilus paréceme resultado de una combina- cién entre el S. aguaticus y quizas el gallicus. La regién gallega presenta cierta aptitud para recibir y aclimatar especies aventureras, asi es que no es raro dar en ella con varias formas americanas. Una de las mas curiosas me fué remitida por el P. Merino el ano pasado, y consultada con el Dr. Kuntz, de Cordoba (Republica Argentina), se sirvid comunicarme lo siguiente: «La planta que U.:tuvo la amabilidad de mandarme es la Soliva sessilis R. et P., especie completamente diversa de la Soliva nasturtiifolia DC.—S. lusitanica (Brot.) Less., ya cono- cida desde Brotero de Lusitania 17 probablemente también de las partes limitrofes de Espana (1). La So/iva sessilis R. et P. (tipo del género) se conoce de Oregon (8. daucifolia Null.), Ca- lifornia, Chile, Argentina y Brasil. De Europa (donde se halla (1) Yo la recogi en los paseos de Sevilla, cerca del cargadero, el ano 1895. Marés ya la dié como de Mahon. ' DE HISTORIA NATURAL. 245 indudablemente introducida, como la S. nasturtiifolia DC.) no se ha indicado hasta ahora, seguin los datos que tengo a mi disposicion.» Otra de las especies americanas es la Oxvalis violacea L., que el P. Merino, con muy buen sentido, dudé perteneciera a la O. violacea Lange! sec. descr. (Wk. et Lge., Prods. III, p. 521). Comunicada a cierto especialista extranjero, opina que perte- nece realmente a la O. violacea L. Lange dice de ella: glabra... lobis (foliorum) acutiusculis... sepalis ovali-lanceolatis, cuando la planta de La Guardia es villosula, l6bulos de las hojuelas muy redondeados en el mar- ven y sépalos oblongc-lineales, al menos en los ejemplares observados. Si Lange describid su planta teniendo a la vista los ejemplares de Santander, resulta existir dos formas diver- sas dadas bajo un mismo nombre especifico, si no es que los caracteres apuntados no tienen valor taxondmico. Diria algo de la Veronica americana, que tambien me parece existe en (ralicia y ha sido recogida por el P. Merino; pero como no poseo tipos americanos, ni ha sido consultada con ningln especialista, me abstengo de darla con seguridad, porque hay que acudir a las descripciones que casi nunca me ofrecieron certeza ni Mme merecieron confianza. Sin embargo, entiendo debe pertenecer a la V’. americana Schweinitz, por ser intermedia entre la Anagallis y Beccabunga. Kl habito es de la primera, pero las hojas pecioladas de la segunda. De la punctata Hamilt., parecida 4 ésta, é intermedia como ella entre las citadas, difiere por la figura de las hojas, y de la Michauacii Lam. lo hace por ser lampina. También indica el P. Merino como nueva especie para la flora espanola (Coni7., pag. 112) el Lepidophorum repandum DC. Y como nuevas para Galicia y notables por extenderse el area de su dispersidn, merecen recordarse el Lupinus hispanicus B.R., Genista Histryr Lee., Margotia gunamifera Lge., Chei- lanthes hispanica Mitt., Centaurea Langet Nym., etc., ete. Uno de los géneros que mas did de si, y que el P. Merino estudid con mas detenimiento, es el Romulea Maratti; pero admite el 77richonema en muchos anos posterior. El género Romulea fue propuesto por Maratti en la obra Plantarum Romulee, et Saturnine in Agro Romano existentiam specificas noltas describit inventor D. Joannes Franciscus Ma- 246 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA ratti, etc. Rome, 1772, y el Zrichonema por Ker, el ano 1805. (Ann. of Bot.) En vista de ésto, la Ziichonema coronatum Merino debera cambiarse por Romulea coronala; la Tr. anceps Merino, Rom. anceps, etc., y la Zr. viride Merino, resulta (Supl. J, p. 16) igual ala Romulea bifrons Pau, segin el P. Merino, que las com- paré ambas en descripciones y ejemplares que le proporcioné de la especie gaditana. {s preciso conocer 4 fondo la flora gallega para darse cuenta de la extraneza que siente el botanico al revisarla: se esta en presencia de una flora de transicion en la cual el meridional se encuentra embarazado al determinar los ejemplares. Mi sor- presa, en vista de los envios 4 que antes hice referencia, iba siempre en aumento: cada nuevo envio aumentaba las dificul- tades, por cuanto la mayoria de las plantas pertenecian 4 for- mas mas 6 menos diferenciadas de la especie clasica. Es un mundo aparte el Canton gallego, del cual pueden publicarse a millares las formas nuevas, inundando de especies la flora de la Peninsula. Por lo tanto, hay que admirar el prudente crite- rio y buen juicio del Rdo. P. Merino, cuando, pudiendo publi- car gran numero de tipos nuevos, se redujo a hacerlo tinica- mente de los mas importantes. Otro de los méritos del P. Merino consiste en que con sus trabajos ha contribuido al conocimiento de la flora gallega, que era por extremo imperfecto; ha vulgarizado lo que ayer apenas se conocia; ha hecho con !a flora de Galicia lo que Costa con la catalana, Loscos y Pardo con la aragonesa y Bois- sier con la granadina. Deben estar muy agradecidos los galle- aos al P. Merino, y la SocirpAD ESPANOLA DE HISTORIA NATURAL muy orgullosa en contar entre sus miembros un socio cuya laboriosidad puede competir con la de los mas activos que co- nocemos.» —El1 Sr. Lazaro dié lectura a la siguiente «Noticia de D. Fernando Infante de Aurioles, botunico espanol del siglo XVII. Entre varios libros antiguos que adquiri hace dos anos y que procedian de la biblioteca de nuestro malogrado consocio 1). Manuel Maria José de Galdo, figura un ejemplar de la obra titulada Stirpium Historie Pentades sex, de Remberd DE HISTORIA NATURAL. 247 Dodoneo, cuya impresion se hizo en Amberes, en la imprenta de Plantin (1552). Esta obra interesante, curiosa y profusa- mente ilustrada, llamoé desde luego mi atencidn por dos par- ticularidades que daban mayor valor al ejemplar y por las cuales me decidi a incluirle entre los que deseaba adquirir de dicha biblioteca. En primer lugar se observa que todas las figuras estan ilu- minadas &~ mano, y no por los operarios de la casa editorial, pues las figuras de esta obra se publicaron en negro, sino por aleuno de los poseedores que dispusieron de este ejemplar, sin duda por el mismo cuyo nombre encabeza estas lineas. La iluminacion esti cuidadosamente hecha y con un esmero y exactitud de colores que no tienen las obras ilustradas en color, aun en tiempos muy posteriores. Esto hacia suponer que habia servido en sus trabajos a aletin botanico, tan buen observador coino concienzudo. Llamoé mi atencién aun mas, la profusidn de notas margi- vales, & veces Inuy extensas, escritas unas en latin y otras en castellano, entre las cuales, a la primera ojeada, hallé al- @unas que me parecieron verdaderamente interesantes. Teniendo ya en mi poder el ejemplar revisé mas detenida- mente estas notas y confirmé mis primeras impresiones. Alg@u- nas de ellas ofrecen caracter bibliografico y estan dedicadas a relacionar las observaciones de Dodoneo con las de Dioscérides, Cesalpino, Lobelio, Clusio, Gaspar Bahuino y especialmente con la edicién del Dioscérides, hecha por el espanol Laguna: en ellas se completan muchas citas de los autores antiguos y se rectifican algunos errores de interpretacion de los textos clasicos de la antigiiedad. Otras se refieren a los usos médicos de las plantas y de sus productos, y entre ellas las hay curio— sas y con mucho caracter de época. Muchas estan destinadas * completar el texto del Dodoneo con los nombres vulgares espatioles de varias de las especies figuradas. En bastantes se indican minuciosamente localidades espanolas de algunas de estas plantas y estas Ultimas anotaciones son las que me pa-— recieron desde luego de mayor importancia. jn vista de esto procuré averiguar primeramente si todas lus notas podrian ser de una misma persona, cosa que me parece poder afirmar por el caracter de la letra, y después puse to. lo mi empeno en inquirir quién podria ser el antor de ellas. 248 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA Desde luego se comprendia por el contenido de estas notas que el autor debid ser una personalidad dotada de extensa cultura, perito en Botanica y en Medicina, y que a juzgar por las fechas que en muchas notas se precisan debid florecer al comenzar la segunda mitad del siglo xvi. Juzgase también que su autor viajd bastante por Espana, dado que cita locali- dades y comarcas muy diversas de nuestro pais y que debic ser persona de posicidn que poseia un verdadero jardin bota- nico, puesto que en muchas notas se hace referencia a las plantas cultivadas en su jardin y en la mayoria de ellas no se trata de plantas que pudieran cultivarse con fines ornamen- tales. Tales circunstancias excitaron mas mi curiosidad y aumen- taron mi empeno por resolver esta incdg@nita, y para ello lei detenidamente todas las notas manuscritas en los huecos de las figuras y cubriendo a veces todas las margenes. Pero en ninguna de ellas encontré mencionado el nombre del autor. y sélo en la pag. 478, entre las partes tercera y cuarta y al pie de una poesia latina que sirve como de encabezamiento a esta Ultima (De frumentis, leguirinibus, palustribus et aqua- lilibus, ac eo pertinentibus herbis), se lee: «El Dr. Fernando Infante, ano 1654» y a continuacion una curiosa ribrica que tiene caracter de época. Como quiera que el caracter de letra parece ser el mismo empleado en las anotaciones y parece estar alli como signo de propiedad del ejemplar, Unico nombre que en él se lee en estas condiciones, traté de comprobar si era verosimil que esta persona reuniese las condiciones que las notas hacian suponer. Y en efecto, el Dr. D. Fernando Infante de Aurioles fué un médico y escritor espanol del siglo xvi, y que segtiin puede leerse en el Diccionario bibliogrifico de la Medicina espanol (tomo v, paginas 375 y 376) nacié en Carrién y procedia de una familia de antigua é hidalga progenie y originaria de las montanas de Burgos. Estudié medicina en la Universidad de Aleala, en donde obtuvo el grado de Doctor y fué médico del Hospital general de Madrid y mas tarde de la reina. Seguin Rodrigo Méndez de Silva. erudito y cronista de la época, que se ocupd en estudios wenealdgicos acerca de la familia de In- fante, afirma que éste tenia escrita, y 4 punto de dar a la imn- DE HISTORIA NATURAL. 219 prenta una gran obra sobre la //istoria universal de las plan- /as de estos reinos, la cual no parece que se publicd y cuyos originales estaran olvidados 6 se habran perdido. Este Dr. In- fante es el autor de una obra médica de gran fama en el siglo mencionado (La magna y canonica Cirugia de Guido Cauliaco, Madrid, 1658), y de la que se hicieron después ediciones en latin y en castellano. Hl nombre de Fernando Infante figura en el Catalogo de Autoridades, publicado por la Academia K’spanola. Kin vista de estos datos, concordando las fechas que en las notas figuran con las que se indican en la biografia del doc- tor Fernando Infante, coincidiendo las condiciones de meédico, botanico, hombre de cultura literaria y que pudo disponer de todos los medios, como las notas hacian suponer, no dudé ya que a él pertenecié el ejemplar de Dodoneo que hoy poseo y que éste es el autor de las notas que le ilustran, y acaso el que ha coloreado sus figuras 6 dirigido al menos este trabajo. No cabria dudarlo ante detalles tan elocuentes como el de aparecer en algunas notas el nombre de Guido Cauliaco, tan estudiado en la gran obra médica de Infante, y el mencionar en alguna de sus notas que vid laCalystegia Soldanella en San Sebastian el ano 1660 «yendo en la jornada de su Magestad i los casamientos de Francia». Como Infante fué médico de la Real Camaraen tiempo de Felipe IV, y una de las clausulas del Tratado de los Pirineos, estipulado por éste en 1659, era el matrimonio de Luis XIV con la infanta Maria Teresa, casa- iiento que no se efectud hasta el 9 de Junio de 1660, la coin- cidencia de fechas comprueba la exactitud del supuesto que hacemos respecto del autor de estas notas y hasta la fecha iltimamente citada, propia para la floraciédn de la Ca/ystegia Soldanelia, demuestra la autenticidad de ellas, pues la men- cionada especie se encuentra aun ahora en la localidad men- cionada, en los arenales situados a la derecha de la desembo- cadura del Urumea, enfrente de la Zurriola. Una vez resuelta la incdgnita referente a la personalidad del autor que asi habia ilustrado tan curioso libro, y que por haber cultivado el estudio de nuestra flora en una época de la cual no han llegado ala nuestra muchos ni mnuy seguros datos, he creido que su nombre debiera ser dado a conocer, tanto mas cuanto no se hace mencién de él en los trabajos 250 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA bibliograficos referentes 4 la Botanica espanola, ni siquiera en los tan completos y eruditos datos compilados por mi maes- tro Sr. Colmeiro en varias de sus publicaciones. Las notas que de este autor figuran en las margenes del mencionado libro son realmente muy heterogéneas, pero para dar alguna noticia de ellas podremos considerarlas divididas en tres clases. Unas de caracter médico, referentes a los usos, aplicaciones y virtudes medicinales que entonces se atribuian a las plantas, muy distintas por cierto de las que hoy les reco- nocemos. Otras se refieren 4 comentarios, identificaciones y rectificaciones que son hechas por el Sr. Infante respecto de muchos pasajes de los autores tenidos por clasicos hasta en- tonces en los conocimientos botanicos, y aun alguna vez cu- riosas referencias a pasajes de alguna obra literaria clasica de la antigiiedad. Otras, por ultimo, se refieren a registrar la presencia de plantas notables en localidades espanolas y a ilustrar el texto con la adiciédn de los nombres vulgares espa- noles de muchas especies. Considerando que las notas referentes alas localidades bota- nicas nuestras son de mayor interés, y que por su autentici- dad y precisidn son muy estimables, siendo ademas curiosas por el tiempo en que fueron escritas y hasta por la forma in- genua y evidente caracter de época que se observa en su re- daccién, insertaré algunas de las que mas me han llamado la atencién, conservando escrupulosamente su estilo y orto- orafia caracteristicas. Se comprende que las referencias 4 la nomenclatura hoy haya tenido que hacerlas por mi propia cuenta, y por esto y por no dar vesta noticia demasiada extensidn, he descartado muchas de las notas cuya referencia seria muy dificil de hacer de un modo preciso, insertando tnicamente aquellas en que he creido que podia designar sin duda con nombres hoy co- rrientes cuales fueron las especies aludidas por el Sr. Infante en sus notas. Veronica arvensis L. «Esta es la veronica que abunda. Cam- pos de Madrid.» Ajuga Iba Schreb. «La caxqueja que llaman en Galicia, en (;ranada y otras partes de Castilla y Portugal.» Conyza ambigua DC. «Nace esta planta en Ribas, en la bajada por el prado desde el convento al pueblo.» z ——> DE HISTORIA NATURAL. 251 Euphrasia officinalis L. «En Somosierra, por Agosto tiene su perfeccion.» Euphragia viscosa Benth. A ésta debe referirse una nota de una planta de la que dice: «se parece a la eufrasia en algo: sus flores son amarillas. Esta es la que se halla en Ribas.» Spired Filipendula L. «Hallase en las sierras a Madrid pré- ximas.» Spirea Ulmaria L. «Ay mucha en las sierras opuestas a Madrid y dase bien en los jardines no la faltando riego.» Hypericum tetrapterum L. «Sus tallos son cuadrados. Hallé muchos en Somosierra por Agosto, ano 1658.» Androsemum officinale All. «En Guiptizcoa ay mucho. Usan de ella mucho sobrepuesta en heridas y llagas.» Epilobium hirsutum L.y #. parviflorum Schreb. «Todos estos lisimachios en la Casa de Campo.» Marrubium Alyssum L. «En la campana de Madrid con mu- cha abundancia.» Plantago subulata L. «Ay mucha en la campana de Madrid, particularmente en San Isidro.» Senebiera Coronopus Poir. «Conocila en mi jardin, ano 1654, que se nacié de por si. No ha llegado a mi noticia su nombre vulgar, porque de nadie es conocida, y entre tanto la llamare estrella mar tendida 6 supina.» Sempervivum tectorum L. «Floreciéme en mi jardin por Agos- to de 1658. En los lugares la plantan en los texados. Alrededor de Madrid ay muchas. Sedum Telephium L. Entre otras cosas dice: «en Andalucia llamantla cangilona.» Brunella vulgaris Moench, «Los valencianos (que estiman mucho esta planta) la llaman cexe, sexe y sex y conocen dos diferentes a estas aqui pintadas y Haman cexe del horto y cexe del monte y 4 esta alaban sobre todo.» Probablemente estas dos, a juzgar por los detalles extensos que da, son la Br. alba Pall. vy la Br. hastefolia Brot. Geum Montanum L. « El Sr. Chaves presento la siguiente nota: «Sobre las inclusiones de un ejemplar de sal azul y otro de thenardita tenido al parecer con el mismo pigmento. El ejemplar de sal azul de cuyo estudio microscOpico voy:a dar cuenta 4 la Sociedad es de localidad incierta. Al adqui- rirlo quedé en la duda de si procedia de Villarrubia de San- tiago 6 de Minglanilla. Tiivelo al principio como de esta pri- 262 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA mera localidad; pero las observaciones del Sr. Calderén acerca de ejemplares del indicado yacimiento, demostrando la caren- cia de inclusiones en la sal de Villarrubia, me inclinan A creer que procede de Minglanilla. A simple vista y bajo una cierta incidencia de luz solar, y aun de un mechero de gus, se observan en el seno de la masa de dicha sal azul las multiples reflexiones que en las inclu- siones se producen. Con un débil aumento es facil descubrir al microscopio que estas inclusiones son liquidas, de seccién cuadrada 6 rectangular, es decir, cristales negativos de ele- mentos paralelos a los del ecubo (las preparaciones han sido DE HISTORIA NATURAL. 263°: obtenidas por exfoliacion). En el liquido que llena estas in- ° clusiones se encuentra rara vez una burbuja gaseosa fija, cuyo deslizamiento no he podido observar, no obstante haberlo intentado inclinando las preparaciones en distintos senti- clos (1). Estas inclusiones son abundantisimas, y ofrecen una varie- dad de dimensiones notable, desde las que se perciben ya con auxilio de la lente hasta aquellas en que los mayores aumen- tos no permiten distinguir contorno regular. Se observan también, por mas que sean escasas, otras in- clusiones 6 moldes negativos llenos de liquido, alargados, prismaticos y terminados por formas piramidales. En ellas se aloja una burbuja gaseosa alargada, esto es, eliptica, debido ala forma de la cavidad. Una de las que he visto recuerda una forma hemimorfica negativa, y va dibujada en la figura adjunta. Estas inclusiones alargadas son, a veces, finisimas, y de longitud relativamente considerable, simulando estrias paralelas. Muy abundantes también y de tamamos diversos son otras inclusiones esféricas 6 utriculares, mas 6 menos regulares y mucho mas pequenas, que parecen ser liquidas. En su inte- rior no se observan burbujas gaseosas. En la figura aparece una inclusion esférica, granulosa, de color amarillento palido, respecto a cuya naturaleza no me ha sido posible conjeturar nada. | Son notables unas inclusiones muy alargadas solo percep- tibles con grandes aumentos, orientadas paralelamente, en- corvadas e irregulares, aunque siempre de contornos redon- deados, que parecen también ser liquidas. Pero las inclusiones de mas interés que contiene el ejem- plar de sal azul que me ocupa, son las que se perciben sola- mente con el objetivo de inmersion, y que, a causa de su pequenez, no permiten reconocer una forma bien definida, pudiendo tomarse en consecuencia por colonias bacterianas 6 bacilares. No soy yo, ciertamente, de esa opinion, y creo que antes de ajustar a ella las conclusiones que sugiere el estudio de los ejemplares coloreados de sal gema, es indispensable (1) En algunas de estas inclusiones parecen esbozarse cuaras de octaedro, pero no cde modo que pueda afirmarse ésto de una manera categorica 26 ACTAS DE LA SOCIEDAD ESPANOLA separar los cadaveres de dichos microorganismos por centri- fuguizacion de la disoluciOn acuosa. En el sedimento reco- gido en las mas perfectas condiciones de asepsia en vasijas privadas completamente de cadaveres de otros microorganis- mos, debiera, 4 mi juicio, investigarse si subsisten dichas formas bacterianas 6 bacilares observadas en las preparacio- nes de sal, ensayando los diversos procedimientos de colora- cion. Pero creo, no obstante, que si la substancia de los mi- croorganismos encerrados en la sal ha contraido combinacio- nes quimicas con el cloruro de sodio 6 con alguna otra de las materias constitutivas de las impurezas que en la sal gema lo acompanan, y estas nuevas combinaciones son solubles en agua 6 en la disolucién de dicho mineral, seria indudable- mente infructuosa esta investigacion, que, sin embargo, debe ser intentada. A mi modo de ver, las indicadas inclusiones, que afectan formas redondeadas, bacilares y encorvadas, dibujadas en esta figura, no difieren esencialmente de las que ofrecen mayores dimensiones y que antes he descrito; dado que, como ya lo he hecho notar, las inclusiones del ejemplar observado muestran todas las dimensiones posibles, desde las que se perciben con auxilio de la lente 6 un fuerte foco luminoso hasta las que exigen el empleo del poderoso objetivo de inmersion de un excelente microscopio Zeiss. Jn resumen, no desconozco la verosimilitud de la hipotesis dada 4 conocer por el Sr. Calderon de que la materia colo- rante azul del ejemplar que he estudiado tenga un origen bacteriano, pudiéndose considerar desde luego como una subs- tancia organica de naturaleza semejante a las que manejamos en el laboratorio, si bien dotada de propiedades especiticas, algunas de las cuales he tenido ocasidn de observar y dar a conocer en notas anteriores: pero creo que existe una gran di- ficultad en establecer la dependencia entre dicha materia cro- mogena y los cadaveres de los microorganismos encerrados en la sal gema, si los hubiere. Aun en este supuesto, no dejaria de tratarse de una materia colorante organica muy inestable, opinion en que me afirman, repito, mis anteriores observa- ciones. Con objeto de hacer extensiva la investigacion a las colora- ciones de otros minerales, he tallado una preparacion : de “DE? HISTORIA NATURAL.: "7 265 thenardita azul de Villarrubia de Santiago que ha tiempo me dono el Sr.»Calderén, iy que parece’ ofrecer -iguak-pigmento que la sal gema de la misma localidad y de la Ming }anitla. in esta preparacion he observado la ausencia de cavidades negativas, encontrando, en cambiv, abundancia de las peque- nas inclusiones bacilares elipsoidales 6 redondeadas que simu- lan colonias de microoreanismos. » SECCION DE ZARAGOZA. Sesi6n del 12 de Octubre de 1899..- PRESIDENCIA DE DON JOSE A, DOSSET. Fue leida y aprobada el acta de la sesién anterior. _. —EI1 Sr. Moyano dio lectura a las siguientes «Notas etnologicas sobre ganado espanol (A), Il. Raza ampurdanesa. (Baws caballus ampurdanus.) Sinonimia.—Raza cerdana espanola y caballo ampurdaneés. Caracteres etnicos morfologicos.—Los caballos pertenecientes ala raza ampurdanesa son de mediana corpulencia, y enssu conformacion dominan los perfiles rectos. Da@pbla med tan ote a ac8 oie ea tae tens 1,52 m. Perim etre: tOracicor. tom ate es 2 1,64 Longitud del tronco..... wedaeia bees mys el aL) PGSOcCMECIC-EUAVIVOI. eee ee 370 ke. La piel es gruesa, capa frecuentemente obscura, dominando el negro peceno 6 castano. | La cabezw es estrecha, grande y algo puntiaguda, con perfil de la cara recto, hasta la parte inferior de los supranasales, y desde este sitio al final ofrece ligera convexidad; las arejas slelole mate 12 Abono hecho para gastos de COrreOS PpOYr VALIOS SOCIOS..+.e.eeeeeseeeeee cere 4 SROTAT Cente a erties 8 talerters 6.039,66 GrAs SHE OS" Abonado por papel para las publicaciones de la SOCIEDAD..............4-- 862 Id. por impresiones y tiradas aparte de las Memorias y Actas ...... 3.531,82 Id. POLAMINAS, yo NA VAC OS Peeves ate eccse .!oleie « wleferstelels winisleleia sia -1a\e0\6in.e ols 255,30 Id. por haberes) delidependiente. voc o- <<<. - = one jericiseiesinisieieee 0 sire « 480 Id. por gastos de correos y envio de ANALES y Actas..........+....4- 342,02 Td. POE GAStOS MENOLES ere ) “one. 4 4 vs Re RP OTe ee) tf ee, Bag) es METS Rn ia ea ASRS teed : 276 INDICE DE LO CONTENIDO EN LAS ACTAS DEL ANO 1899. Cuaves (f’.)—Notas mineraldgicas. ..... Niet aim ab, Rice oer ae cake orca Barras (F. de las).—Datos para la florula sevillana (continuacion)... Navas (P. L.)—Una excursién al Montsant (Tarragona). Notas bota- PACE ae ls. |. G Min ohn Misia niwis,o shia ols = SLR sdeaie same ples wes se Jimeno (H.)—Pirolusita cristalizada de Torrecilla (Teruel)..... tatg wale Seston det.d.0 de Marzo. bf ys EE ak Spt wdee ee cer cian Uae a ae Casatiero (E.)—Presentacién de fotografias de diatomeas de Moron. Bascd (E.)—Noticias sobre una coleccién paleontolégica regalada al Exemo. ‘Ayuntamiento de Valencia....... A SIN eR gd Pav (C.)—Cist&ceas curiosas de Segorbe®..... 2.2.2... ce eccecess CaLpEROn (S.)—Columbretes y Alboran, por el Archiduque Luis Sal- yedormota DibMORrAnGar yes hacer ste Aose.c eee a ela ies eels Penein, TEL Pe AED PEL... nic Bh the eo claws Geico Bia Foe ealto tastes Pure y Larraz (G.)--Observaciones acerca de las obras «Columbretes WV AADEVENY . 2 echo medatuh-o >. % es homme a ea eeba aeeree = Botivar (1.)—Anataélia, género nuevo de forfictlido............-. # Rivas Mateos (M.)—Datos para la flora gallega..........0.-se00e- FernAnpez Navarro (L.)—Ligeras observaciones sobre la nomencla- tura castiza de los minerales....... en Tok Higbee aaeh ee Dusmer (J.)—Algunos formicidos y mutilidos de Espafia........... Ropricguez Movrevo (J.)—Sobre la obtencion del sulfuro de estroncio fosforescente por medio del carbonato de estroncio y el va- por devacuires saan ch Seiidie hl. 8 Balsa ahs tes weak ewes Cuaves (F.)—Sobre un ejemplar de oropimente........ He Ps tate a3 Mepina (M.)—Datos para el conocimiento de la fauna himenoptero- logica de Eapafin. '\. :2). 2 saie't, silos wn. so oa ee nla oe eee Ue Barras (F. de las). —Datos para la flérula sevillana (continuacion)... Moyano (P.)—Notas etnologicas sobre el ganado espanol (clasifica— Acuivar (C, L.)}—Apuntes para el estudio del mioceno bilbilitano... Sesion extraordinaria del 3 de Mayo de 1899 (nombramiento de so- ciog ipratectores);'-",'.%.. awa a ga Soe haters Bes) Sesion del:3ide Mayo de LBIO ir isk stcicaadd chin pict nie Wels diabad'ws elle t Bovivar (I.)—Observaciones 4 una nota del Sr. Soler sobre predilec- cién de las abejas por ciertas flores....... ite & anpiele — Dos formas larvarias de lampiridos...............08- SeeBo pn (T.) y, Scuramm (G.)—Datos para el conocimiento de la fauna hemipterolégica de Espafia, «Bilbao y alrededores»....... Barras (Ff. de las).—Crdneo antiguo encontrado en Valdemiranda (Ralencia).). i. tind ico a de Atk dae Ae eh cee ad Roprievez Meureto (J.)—Sobre la fosforescencia del sulfuro de es- ATORCIGs 0. oe ews vee c as debe its SOP ROM babs CSE RNIE Fee S 69 75 76 80 81 81 82 90 94 97 97 97 99 102 109 111 ° 114 115 116 118 123 127 129 129 130 130 133 141 INDICE DE LO CONTENIDO EN LAS ACTAS DEL ANO 1899, Ca.peron (S.)\—Examen de algunas rocas cristalinas de la provincia’ de Cordoba, recogidas por D. Lucas Mallada............. Barras (F. de las).—Datos para la fidrula sevillana (continwacidn)... Vicroso (B.)—Noticia necrolégica acerca del Dr. Nylander.......... So.er (J. P.)—Preferencia de las abejas por las flores del mesem- PrIANteEMG,.. etate ... 20... Dees ee eee -- Plantas de Ibiza no mencionadas en la flora balear. . Azpeitia (F'.)—Presentacion de una notable preparacién de diatomeas hecha-porel Sr. Caballeroi, sis vice te hare e oote us ee ae CaLpEeron (S.)—Notas bibliograficas «Morphométrie de Ténériffe», par Windt y «Ueber das Meteoreisen von Quesa>», por Ooher: So. c#iay aoe TEA a cer ee ere. ee tee Victoso (B.)—Plantas de las inmediaciones de Calatayud.......... Sesidn der S de Nousembre de S998 i.% oa «1 tists hoe whee ce aielne ne Pore y Larraz (G.)—Sobre la supresién de la Estacion de Santander. Barras (F. de las).—Noticia de un temblor de tierra acaecido en Pa- lencia el 4 de Agosto ultimo. (Los Sres. Rodriguez Mourelo y Azpeitia dicen que se extendio 4 la Toja).............. 277 278 INDICE DE LO CONTENIDO EN LAS ACTAS DEL ANO 1899, Cautperow (S.)—Nota bibliografica «Das Huelva-Kiesfeld in Siid- Spanien und dem angrenzenden Theil von Portugal», por VOIR, Sica iee.: «.c\ninicintn cin, Bipic' a. ein @eue bie Mean ee ipfereinie DE oe Reurmpio (F.) y Cuaves (I’.)— Estudio del espectro de absorcién de la sal azul de Villarrubia de Santiago................ _ Estudio de los espectros de absorcién de algunos mi- Weralos coloresdog,.. uv. eu asicie ee hae hae eM eee Menpina (M.)—Noticia de un yacimiento de fosfato de cal con huesos fésiles en Puebla de los Infantes..............0..000 os ‘ Cuaves (F.) — Cerusita de la Aliseda (Jaén)........-.-.---00- ae Navas (P. L.)—Notas entomoldogicas (Pycnogaster brevipes)......... Parpina (C.)—Compouente horizontal magnética de la Tierra en Za- raporaien.° de: Mayo'de 1890... wie ete ne meee Seaton. del ‘Gide Ttariembre: da 199 9 oie 0p ac die ocatiaia yo ov aie ia spies Artigas (P.)—Sobre la supresién de la Estacion de Santander...... Pau (C.)—La flora de Galicia y el Rdo. P. Merino........... ia catentp LAzaro (B.)—Noticia de D. Fernando Infante de Aurioles, botanico espanolnel siglo x Vitse/s52 kG Seal cote hele oe eas eee Barras (F. de las).—Noticia sobre algunos animales de Luzon perte- necientes al Museo de Seyilla..... We on Wesle ate — Datos para la flérula sevillana (continuacion). . Cuaves (F'.)—Sobre las inclusiones de un ejemplar de sal azul y otro de thenardita tefiido al parecer con el mismo pigmento.... Moyano (P.)—Notas etnoldgicas sobre el ganado espafol. Razas eaballarees 1 sich is aleer sian te eine Sa dies ARP pinta a eee ate ie os Navas (P. L.)—Notas entomoldgicas. II. Ort6pteros del Montseny (BMTOBIONA): .1ciins Wclio We Ric ke olen ales Ray od eb eles Indice de lo contenido en las actas de la Sociedad espafiola de His- LOVER TAEOT AL) sic’ a cinteiclpim wernibials bi pSote elelo dg eee ei wie oie hisaitele Indice alfabético de los géneros y especies descritos, 6 acerca de cuya patria 6 sinonimia se dan noticias interesantes....... INDICE ALFABETICO DE LOS GENEROS Y ESPECIES DESCRITOS, O ACERCA DE CUYA PATRIA 6 SINONIMIA SE DAN NOTICIAS INTERESANTES EN LAS ACTAS. Abeja, 130, 158. Absolana, 108. Acanthosoma hzemorhoidale, 134. Acanthus mollis, 166. Acarospora discreta, 191. — glaucocarpa, 190. — perceenoides, 190. — smaragdula, 190. Acer Monspessulanum, 223. Aceras hircina, 252. Achillea ageratum, 198, 260. — millefolium, 66, 198. Acocephalus albifrons, 141. — carinatus, 141. — histrionicus, 141. — serratule, 141. — striatus, 141. Aconitum lycoctonum, 39. — paniculatum, 36. Acrida, 272. Acridium, 272. — egyptium, 48. Acrotylus, 272. — insubricus, 48. Adenocarpus complicatus, 66. — intermedius, 66. Adonis xstivalis, 195. — autumnalis, 220. — citrina, 220, Egilops ovata, 202. — triuncialis, 202. Alia acuminata, 134. Afrita, 104. Agraphopus femoralis, 211. Agrostemma Githago, 65, 196. Agrostis canina, 44. — capillaris, 202. — nebulosa, 202. — vulgaris, 68. Aira caryophyllea, 202, 214. Ajuga Iva, 250. Alabastrites, 104. Alauda arvensis, 165. Albina, 108. Albita, 108. Alcornoque, 94. Alisma plantago, 68, 253. Allantus annulatus, 207. — costatus, 207. — Dahli, 207. — ** jugalis, 205. — lautus, 204. NOTA.—1.° Los nombres vulgares van escritos con letra cursiva; los de géneros 6 especies ya conocidos, pero descritos en las Actas, van precedidos de un asterisco, y de dos los que se dan 4 conocer como nuevos para la ciencia. 280 INDICE ALFABETICO. | Allantus ** luminosus, 204. — marginellus, 207. — Nazareensis, 205. — scutellaris, 207. — ** gserenus, 205. Allium ampeloprassum, 201. — pallens, 68. “— spherocephalum, 68. Allosurus crispus, 45. Aloysia citriodora, 168. Alsine confertiflora, 214. Althzea hirsuta, 197, 223. — ollicinalis, 197. Alydus calearatus, 135. Alyssum calvcinum, 196. — campestre, 196. — hispidum, 207. — montanum, 196. — serpyllifolium, 196. Amaranthus retroflexus, 68. Amasis lateralis, 206. Amazonita, 104. Ameles abjecta, 47, 270. — decolor, 47. Ammi majus, 75. — Visnaga, 75, 198. Ammonites, 172. Amphiloma lanuginosum, 78, 187, Amygdalus communis, 38. Anacyclus clavatus, 66, 198, 261. — radiatus, 261. Anagallis arvensis, 199, 255. — linifolia, 255. Anaptychia ciliaris, 77, 187. ** Anataélia, 97. — ** canariensis, 99. Anax panibeeus, 254. Anchusa italica, 117, 200. — officinalis, 67. — undulata, 117. Ancylus preestans (noy. sp.), 68. — simplex, 68. Andesita, 95. Androsace maxima, 199. Androsemum officinale, 251. Andryala arenaria, 198. — integrifolia, 66, 261. — linifolia, 261. — macrocephala, 66, 198. Anemone coronaria, 35, — palmata, 35, 252. — vernalis, 35. Anethum graveolens, 75. Anfibol, 148 y siguientes. Anglesita, 235. Anhidrita, 105. Anisolabis annulipes, 269. — maritima, 269. Anortita, 95. Anthaxia stupida, 210. Anthemis arvensis, 66, 198, 260. — nobilis, 66, 198. Anthicus * validus, 210. Anthoxanthum odoratum, 202. Anthriscus neglectus, 207. — nodiflorus, 75. Anthyllis lotoides, 197. — vulneraria, 197. Antimonita, 105. Antirrhinum calicinum, 93. — junceum, 156. — majus, 156. — molle, 156. — Orontium, 93, 156, 252. — parviflorum, 93. Apatito, 105, 148, 153, Aphzenogaster barbara, 110. — pallida, 110. --- structor, 110. — subterranea, 110. — testaceo-pilosa, 110. Aphalara lichenoides, 212. Aphanus Pini, 136. — saturnius, 136. — vulgaris, 136, Aphlebia sardoa, 270. INDICE ALFABETICO. 281 Aphlebia subaptera, 270. Arthrolobium scorpioides, 197. Aphyllanthes Monspeliensis, 202. Arum maculatum, 68, 202. Apium graveoleus, 75. Asparagus acutifolius, 20L. — nodiflorum, 75. Asperugo procumbens, 117. Aprophora Alni, 140. Asperula arvensis, 198, 257. — Salicis, 140. — odorata, 257. Apterola * iberica, 211. Asphodelus cerasiferus, 102, 201. — Lownii, 212. — fistulosus, 201. Arabis sagittata, 221. Aspicilia calearea, 78, 191. Arbutus unedo, 256. — chalybeea, 78. Arcilla‘ferruginosa, 64. — cinerea, 78, 125, 191. — roja, 175. — gibbosa, 78, 126, 191. Arctotherium, 89. — Hoffmani, 191. Arenaria capitata, 196. — tenebrosa, 79. — ciliaris, 222. Asplenium adianthum-nigrum, 45, 65. — leptoclados, 222. — Filix-femina, 65. — montana, 65. — lanceolatum, 65. — obtusiflora, 222. Asteriscus aquaticus, 199. — serpyllifolia, 196. — spinosus, 260. — tenuifolia, 196. Asterolinum stellatum, 200. Arge JKtolica, 206. Astragalus hamosus, 197. — cyaneocrocea, 206, — macrorrhizus, 197. — debilis, 206. — narbonensis, 224. — pleuritica, 206. — sesameus, 197. — rose, 206. — stella, 197, 224. — * segmentaria, 204. —- turolensis, 224. Aristolochia pistolochia, 201. Astrocarpus Clusii, 65. Armeria allioides, 201. — suffruticosus, 102. — cantabrica, 244. Ataxita, 217. — elongata, 244, 255. Ateuchopus Libanensis, 205. — fasciculata, 255. Athalia annulata, 206. -—- Langeana, 244. — colibri, 206. — latifolia, 255. — dimidiata, 206. — plantaginea, 67, 244, 255. — glabricollis, 206. Arrhenatherum avenaceum, 202. — lineolata, 206. — elatius, 68. Athysanus obscurellus, 141. Artemisia Absinthium, 199. — plebejus, 141. — aragonensis, 199. — stactogalus, 141. — betica, 259. — variegatus, 141. — glutinosa, 199. Atractylis humilis, 199, 258. — vulgaris, 66. Augita, 94, 95, 152. Arthonia galactites, 126. Avellano, 78. — punctiformis, 79, 126, 192. Avena barbata, 202. 2R2 INDICE ALFABETICO. Avena fragilis, 202. Azufre, 111, 229. Bacillus, 272, — Rossii, 47, 50. Balea Deshayesiana, 68. Ballota hirsuta, 168. — nigra, 67. Barbitistes Yersini, 272. Baritina, 104, 115. Barkhausia alpina, 195, 199. — taraxacifolia, 199, 261. Basalto, 94, 96. Batocera sp? 254. Bellevalia comosa, 201. Bellis annua, 259. — microcephala, 259. — perennis, 199, 259. — sylvestris, 259. Beosus luscus, 136. Berberis vulgaris, 35. Bercelianita, 108. Berceliita, 108. Bercelina, 108. Bercelita, 108. Berzelina, 103. Betonica hirsuta, 167. — officinalis, 67, 200. Biatora fuscescens, 79. Biotita, 64. Biscutella auriculata, 196. — levigata, 39, 196. Bjelkita, 103. Blenda, 105, 233. Bombus hortorum, 115. — terrestris, 115. Borax, 105. Bornita, 106. Borrago officinalis, 117. Bos taurus, 122. Bothryanthus vulgaris, 201. Bourgsea macrocephala, 258. Bournonita, 103. Brachycoleus bimaculatus, 139. Brachypelta aterrima, 134. Brachypodium ramosum, 202. Brassica cheiranthus, 221. Briza maxima, 202. — minor, 202. Bromus mollis, 202. — rubens, 202. — squarrosus, 202. — tectorum, 202. Broxylus, 133. Brunella alba, 67, 251. — hasteefolia, 251. — vulgaris, 67, 251. Bryonia dioica, 66, 198, 257. Buellia badia, 192. — badio-atra, 192. — epigsa, 192. — epipolia, 192. == lavatas-192: Buffonia tenuifolia, 222. Bunium verticillatum, 66, Bupleurum fruticescens, 75, 198. — junceum, 75. — opacum, 198. — rigidum, 43, 198. — rotundifolium, 75, 198. — spinosum, 75. — tenuissimum, 75. Caccobius mundus, 33. — Schreberi, 33. Cachalote, 96. Cakile monosperma, 102. Calamenta filiformis, 205. Calamina, 105, 106. Calamintha acinos, 200. — alpina, 67. — clinopodium, 44, 167. — nepeta, 167. Calcita, 109. Calendula arvensis, 199, 252, 260. — Malacitana, 260. — officinalis, 260. — parviflora, 260. i ee hele i Te eee, Se ae See i all eS I eee oe ee ae ee ee ee INDICE ALFABETICO. Calicium disseminatum, 126. Caliza, 60, 109. — compacta, 176. Calliopsis tinctoria, 260. Callitriche verna, 76. Calluna vulgaris, 256. Calocoris bipunctatus, 138. — Chenopodii, 138. — roseomaculatus, 138. — seticornis, 138. — sexpunctatus, 138. — vandalicus, 138. Caloplaca aurantiaca, 190. — cerina, 190. — citrina, 125. — erythrocarpa, 78, 189. — hematites, 78, 190. — phlogina, 78. — pyracea, 78, 125, 190. Caloptenus italicus, 48, 271. Calopteron, 133. Calystegia Soldanella, 249, 253. Camelina sativa, 196. Campanula erinus, 199, 256. — passifolia, 256. — patula, 67, 256. — rapunculus, 67, 199, 256. Camponotus ethiops, 109. — cruentatus, 109. — micans, 109. — sylvaticus, 109. Camptothecium lutescens, 65. Cantacader quadricornis, 136. Capsella bursa-pastoris, 196. Capsicum annuum, 155. Capsus punctum, 212. Cardamine hirsuta, 101. Carduncellus cceruleus, 259. Carduus crispus, 259. — lanceolatus, 199, — nutans, 199. — tenuiflorus, 199. Carlina acaulis, 258, Carlina gummifera, 258, — vulgaris, 66. Carpocoris baccarum, 134. — nigricornis, 134. Carum verticillatum, 66. Catananche ccerulea, 199. Catharsius molossus, 254. Cathormiocerus cordatus, 58. — lapidicola, 56. Caucalis daucoides, 198. — leptophylla, 75, 198. Celsia Barnadesii, 155. Celtis australis, 192. Centaurea alba, 66, 199. — amara, 43. — apula, 199. — aspera, 102. — calcitrapa, 66, 199, 254, 259. — carpetana, 66. — Cyanus, 67, 102, 199. — diluta, 259. — eriophora, 259. — hyssopifolia, 199. — Langei, 245. — linifolia, 43. — melitensis, 259. — paniculata, 199. — pullata, 259. — Saxifraga, 35. — Seuxana, 67, 199. — solstitialis, 253. 283 Centranthus Calcitrapa, 198, 258. Centrotus cornutus, 140. Ceolita, 107. Cephalanthera rubra, 44. Cephalaria leucantha, 198. — syriaca, 198, Cephus nigrinus, 205. Ceraleptus gracilicornis, i365. Cerastium arvense, 40. — dichotomum, 196. — perfoliatum, 196. — semidecandrum, 196, 284 INDICE ALFABETICO. Cerastium viscosum, 222. Cerasus avium, 38. — caproniana, 38. Ceratocalyx macrolepis, 214. Cerceris emarginata, 115. — lunata, 115. Cerinthe major, 117. Cerusita, 234. Cervus, 88. Cestrum nocturnum, 155. Ceterach officinarum, 65, 202. Cetraria aculeata, 77, 124. Chaleosoma atlas, 254. Cheilanthes hispanica, 245. Chelidonium majus, 196. Chenopodium ambrosioides, 201. — Bonus-Henricus, 44. — botrys, 68. — viride, 68. Chiasmus translucidus, 141. Chiastolita, 103. Chlamydatus pullus, 139. Chlora perfoliata, 256. Chlorita Solani, 141. Chenorrhinum minus, 166. — origanifolium, 200. — serpy!lifolium, 200. — villosum, 166. Chondrilla juncea, 67. Chorlo, 107. Christianita, 103. Chrysanthemum coronarium, 215, — ** Merinoanum, 215. — segetum, 215, 260. Chrysis incisa, 115. Cicadetta argentata, 140. Cichorium intybus, 67, 261. Cicuta virosa, 75. Cimex lectularius, 138. Cinclidotus fontinaloides, 45. Cinconisa, 106. Cionella (Zua) lubrica, 68. Cirsium lanceolatum, 67, 259, Cirsium odontolepis, 199. Cistus albidus, 90, 221. — Clusii, 90. — Corbariensis, 90. — ladaniferus, 196. — levis, 92. — laurifolius, 221. — longifolius, 91. — monspeliensis, 90. — populifolius, 90. — salvizfolius, 90, 196. — valentinus, 91. Citrullus, 257. Cixius nervosus, 140. Cladius sp?, 206. Cladonia alcicornis, 77, 123. — endiviefolia, 77, 186. — fimbriata, 77. — furcata, 77, 123, 186. — pungens, 77. — pyxidata, 65, 77, 123, 186. — rangiferina, 215. — rangiformis, 186. Clematis erecta, 35. — flammula, 35. — recta, 102. — viticella, 35. Cleonia lusitanica, 168. Clorita, 149 y siguientes. Clypeola jonthlaspi, 196. Cnicus benedictus, 199, 259. Cobaltita, 104. Cobre, 228. Cochlearia glastifolia, 221. Colchicum autumnale, 68. Coleostephus Myconis, 260. Collema cheileum, 126. — flacidium, 79, 192. — furvum, 79. — granuliferum, 192. — melenum, 192. — nigrescens, 192. — plicatile, 192. INDICE Collema pulposum, 79, 192. Collemodium plicatile, 79. Conium maculatum, 198. Conocephalus, 272. Convallaria majalis, 252. Convolvulus althieoides, 116. — arvensis, 67, 116, 200. — lineatus, 200. — tricolor, 116. Conyza ambigua, 250. Coranus zegyptius, 137. Corcho de montafia, 104. Cordierita, 104. Coreus denticulatus, 135. — hirticornis, 135. — scabricornis, 135. Coridothymus capitatus, 167, 252. Corindon, 105. Coris monspeliensis, 200. Corixa semistriata, 140. Corizus capitatus, 135. — crassicornis, 135. — hyalinus, 135. Coronilla minima, 197. Corylus avellana, 68. Cota tinctoria, 261. Cotula aurea, 199. Crateegus monogyna, 38, 190. — oxyacantha, 38, 66, 198. Cremastogaster Schmidti, 110. — scutellaris, 110. Crepis barbata, 261. — feetida, 43. — polymorpha, 67. — tectorum, 199, 261. — virens, 261. Crisolita, 107. Cristianita, 106. Crupina vulgaris, 199, 259. Cuarzo, 63, 148, y siguientes, 234. Cucaracha, 96. Cucubalus bacciferus, 65, 253. Cucumis, 257. ALFABLTICO. 285 Cucurbita, 257. Cuscuta Epithymum, 117. — europea, 117, 200. — minor, 67. Cyclamen europzeum, 255. Cydnus flavicornis, 134. Cydonia vulgaris, 38. Cymus melanocephalus, 136. — obliquus, 136. Cynanchum acutum, 116. Cynara cardunculus, 258. Cynodon Dactylon, 68, 202. Cynoglossum Cheirifolium, 117, 200. — officinale, 200. — pictum, 117. Cynosurus cristatus, 45, 68, 202. — echinatus, 202. Cyperus rotundus, 202. Cyphodema instabilis, 139. Cytisus albus, 102. — argenteus; 197. Dactylis glomerata, 202. — hispanica, 68, 202. Dahlia variabilis, 260. Daphne Laureola, 252. Datura Metel, 155. — stramonium, 67, 155. — Tatula, 155. Daucus Bocconi, 75. — carotta, 66, 75. ~— mauritanicus, 75. Decticus, 272. Delfin, 96. Delphax minuscula, 212. Delphinium Ajacis, 36. — consolida, 65. — hispanicum, 36, — juncepm, 65. — Loscosii, 220. — pentagynum, 36. — peregrinum, 36, 195, 220. Deschampsia czespitosa, 68, — flexuosa, 44, 986 INDICE ALFABETICO. Diabasa, 151. — porfidica, 152. Diaforita, 107. Dialaga, 153. Dianthus Armeria, 40, 65, 196. — brachyanthus, 65. — graniticus, 244, — lusitanicus, 65." — prolifer, 34, 196. Dictamnus albus, 197. Digitalis purpurea, 67. — Thapsi, 67. Diplotaxis erucoides, 65, 196. — virgata, 196, 221. Dipsacus fullonum, 66. — laciniatus, 258. — sylvestris, 198. Dirina repanda, 191. Discrasita, 104. Distena, 105. Ditoneces, 133. Deedicurus, 87. Dolerus etruscus, 206. — tremulus, 206. Dolomia, 109. Dolomita, 109. Doreadion Bolivari, 211. — * Fuentei, 210. — Martinezi, 211. — Uhagoni, 211. Dorycnium suffruticosum, 197, 224. Drosera longifolia, 253. — rotundifolia, 40, 65, 222. Dufrenoysita, 107. Ecballium elaterium, 257. Echinaria capitata, 202. Echinops Ritro, 199. — strigosus, 258. , Echium creticum, 117. — gaditanum, 117. — italicum, 67, 117. — Lagasce, 117. — Marianum, 117. Echium plantagineum, 117, 200. — pustulatum, 117, 200. — vulgare, 67, 117, 200. Ectobia livida, 47, 270. — Panzeri, 270. Edelforsita, 107. Edmannita, 107. Elymus caput-Meduse, 202. Emberiza miliaria, 165. Emblethis Verbasci, 136. Emphytus didymus, 206. — sp? 206. Empusa egena, 47, 270. Encina, 77. Endocarpon crassum, 192. — exiguum, 126. — fluviatile, 65. — hepaticum, 192. — leptophyllum, 192. — miniatum, 192. — rufescens, 192. Endressia castellana, 35. Endymion patulus, 244. Enoplops scapha, 135. Epacromia, 272. — strepens, 48. Ephippiger Cunii, 272. — Ortegai, 46, 176. — ** Panteli, 46, 48, 176. — Perezi, 48. Epidota, 148, 150. Epilobium carpetanum, 66. — hirsutum, 116, 251. — palustre, 66. — parviflorum, 116, 261. — Tournefortii, 40. Epsomita, 104. Equisetum arvense, 202. Equus, 87. — asinus, 122. — caballus, 122, 178, 265. Eragrostis megastachya, 68. Erica, 238. ee ee ee ee ee Pa OS ae ea eee to ee INDICE ALFABETICO. Erica aragonensis, 43. — arborea, 256. — scoparia, 67, 256. — tetralix, 39. — vagans, 43, 256. Erinacea pungens, 224. Eriobotrya japonica, 38. Erodium chcerophyllum, 66, — ciconium, 197. — cicutarium, 66. — malacoides, 197. Eruca orthosepala, 196. Erucastrum incanum, 221. Eryngium Bourgati, 102. — campestre, 198. — tenue, 66. Erysimum australe, 196. — perfoliatum, 196. Erythreea acutiflora, 256. — Barrelieri, 255. — Boissieri, 255. — centaurium, 43, 200, 255 — spicata, 255. Esmitsonita, 106. Esparraguina, 69, 105, 234. Espato, 107. — calizo, 176. Espodumena, 105. Espuma de manganeso, 108. Estroncianita, 111. Eucalyptus globulus, 76. Eufotida, 152. Eufragia latifolia, 166. — viscosa, 166. Eupelix producta, 141. Euphorbia chamesyce, 252. — exigua, 201. — falcata, 201. — serrata, 201. Euphrasia minima, 44. — officinalis, 251, — viscosa, 251. Eurydema cognatum, 134. Eurydema ornatum, 134. Eurygaster waroccana, 133. — maura, 133. Eusarcoris eeneus, 134. — inconspicuus, 134. — melanocephalus, 134. EKutatus Seguini, 87. — sp? 87. Evax carpetana, 67. — exigua, 199. Evernia furfuracea, 186. — prunastri, 65, 77, 124, 186. Fedia cornucopie, 258. — graciliflora, 258. Feldespato, 148 y siguientes. Felis catus, 30. Ferula communis, 254. Festuca duriuscula, 45. — levis, 39. — ovina, 202. — pratensis, 202. — sulcata, 39. Ficaria grandiflora, 36. — ranunculoides, 36. Ficus Carica, 201. Filago arvensis, 67, 199, 259. — gallica, 259. — minima, 92. — montana, 67. — spatulata, 199. Filipsita, 106. Fluorita, 105. Feeniculum piperitum, 75. — vulgare, 66, 75, 198. Fonolita, 94. Forficula auricularia, 47, 269. Formica rufibarbis, 110. Fosfato de cal, 234. Fosforita, 105. Fragaria vesca, 37. Frankenia corymbosa, 96. Fraxinus angustifolia, 67. Fringilla carduelis, 165. 288 INDICE ALFABETICO. Fringilla domestica, 165. Fritillaria hispanica, 201, 252. Frullania dilatata, 65. Fuchsia coccinea, 116. Fumana hispidula, 92. — hybrida, 92. — procumbens, 196. — racemosa, 92. — Spachii, 92. Fumaria agraria, 214. — capreolata, 65. — oflicinalis, 196. — parviflora, 65, 196. — spicata, 196. Funaria hygrometrica, 45. Galactites tomentosa, 258. Galatella aragonensis, 199. Galena, 70, 235. Galium aparine, 198, 257. — cruciata, 43. — murale, 257. — palustre, 66. — saccharatum, 257. — sylvaticum, 257. — sylvestre, 43, 198. — tricorne, 198, 257. — verum, 66, 198. Gargara Genist, 140. Gasteracantha, 254. Genista hispanica, 40. — Histryx, 245. -— scorpius, 197, 223. Geomantis larvoides, 47. Geotomus punctulatus, 134. Geranium acutilobum, 35. — dissectum, 197. — pyrenaicum, 66. — Robertianum, 66. Geropogon glaber, 261. Gerris gibbifera, 137. — lacustris, 137. — najas, 137. Giobertita, 106, Gladiolus illyricus, 68, 201. Glaucium corniculatum, 196, 253. Gleditschia triacanthos, 125, 126. Globiceps flavomaculatus, 139. Globularia Alypum, 256. Glycyrrhiza glandulifera, 224. Glyptodon, 86. Gnaphalium luteo-album, 259. Gnathodus punctatus, 141. Gneis, 65. Gomphocerus maculatus, 48, 271. Gonfolita, 176. Gonionema yelutinum, 192. Gonocerus acuteangulus, 211. Grafito, 105. Granito, 147. Graphosoma lineatum, 133. — semi-punctatum, 133. Grimnia pulvinata, 65. Groroilita, 108. Gryllodes pipiens, 272. Gryllomorpha sp?, 48. Gryllotalpa vulgaris, 48, 271 Gryllus Burdigalensis, 272. Habrotamnus elegans, 155. — umbellatum, 196. Hallita, 107. Halticus luteicollis, 139. Harmotoma, 107. Harpactes leevis, 115. Harpactor erythropus, 137. — iracundus, 137. Hedera helix, 66, 76, 198. Hedypnois polymorpha, 199, 261. Hedysarum humile, 197. Helianthemum Barrelieri, 92. — glaucum, 65, 196. — montanum, 196. — paniculatum, 196. — pilosum, 196. — squamatum, 196, — viride, 92. — vulgare, 196. INDICR ALFABETICO. 229 Helianthus multiflorus, 260. Helichrysum serotinum, 57, 199. — stoechas, 199, 259. Heliotropium europzeum, 117, 200. — peruvianum, 117. — supinum, 117. Helix adspersa, 68. — nemoralis, 68. — pisana, 96. Helosciadium nodiflorum, 66. Heppia Guepini, 187. — obscurans, 187. Herniaria glabra, 66, 198. — hirsuta, 198. — scabrida, 66. Heterocordylus Genistx, 139. — tibialis, 139. Heterogaster Artemisiz, 136. — Urtice, 136. Heterotoma merioptera, 139. Hidrocincita, 105. Hieracium amplexicaule, 43. — castellanum, 43. — Pilosella, 43, 199. — Sabaudum, 43. — sylvaticum, 43. — Vahlii, 39, 43. — Willkommii, 39, 43. Hierro piritoso, 176. Hiperstena, 95. Hippocrepis ciliata, 197. — comosa, 197. Hippomarathrum pterochle- num, 75. Holcus lanatus, 68. — mollis, 44, 68,202. Homo, 89. Hoplophorus ornatus, 86. — scrobicurvatus, 87. = sp?, 86. Hordeum secalinum, 202. Hornblenda, 94, 103. Hulla, 106. Humboldtilita, 108. Humboldtina, 108, Humboldtita, 108. Humulus lupulus, 68. Hutchinsia aragonensis, 221. — procumbens, 221. Hydrometra stagnorum, 137. Hyoscyamus albus, 155, — niger, 67, 155, 200. Hypecoum grandiflorum, 196. — pendulum, 196. Hypericum perforatum, 66, 197. — quadrangulum, 66, — tetrapterum, 251. Hypocheeris radicata, 67, 261. Iberis amara, 102, 221. — linifolia, 102. — pinnata, 196. Ichnurus pistaceus, 254. Ilvaita, 105. Inula helenioides, 43. — montana, 199. ° — viscosa, 199. Tris germanica, 201. — pseudacorus, 68, 201. Ischnorhynchus geminatus, 136. Isolepis Holoschenus, 202. Isophya pyrenea, 272. Issus coleoptratus, 140. Jade, 108. Jasione bracteata, 256. — carpetana, 67. — fallax, 39, 43. — humilis, 39. — montana, 67, 199, 256. — perennis, 67, 256. Jasminum fruticans, 116. — grandiflorum, 116. — officinale, 116. Jasonia glutinosa, 199. Jassus mixtus, 141. Jugurtia oraniensis, 115. Juncus bufonius, 44, 68. ACTAS DE LA SOC. ESP. DE H. N.— DICIEMBRE, 1899. 19 210) INDICE ALIFABETICO. Juncus effusus, 68, 202. — heterophyllus, 244. — lamprocarpus, 68. — sylvaticus, 68. Juniperus communis, 201, 236, 272. Jurinea humilis, 199. Kamacita, 217. Kaolin, 103. KXapnita, 103. Keilhanita, 103. KXentrophyllum lanatuim, 199, 259. Kerargira, 103. Kieserita, 103. Kobellita, 103. Kochia scoparia, 201. Kceleria crassipes, 68. — cristata, 202. — phleoides, 202. Koniga spinosa, 187. Kopsia Muteli, 214. Labops minor, 139. — saltator, 159. — (Dimorphocoris) * tristis, 31. Labrador, 151, 152. Lactuea Scariola, 261. — virosa, 67, 26i. Lagenaria, 257. Lamium album, 168. — amplexicaule, 67, 167, 200. — Galeobdolon, 67. — purpureum, 200. Lappa major, 199, 259. Lapsana communis, 43, 67. Laserpitium latifolium, 43. Lasius alienus, 110. — flavus, 110. — niger, 110. Lathyrus angulatus, 197. — ciliatus, 93. —- sativus, 224. — sphrericus, 224. — sylvestris, 66. Laurus nobilis, 33. Lavandula multifida, 167. — pedunculata, 67, 167, 200, 252. — spica, 200. — Stcechas, 167, 200. Lavatera triloba, 197. Lecania erysibe, 190. — syringea, 125, 190. Lecanora zegopholis, 190. — albella, 78, 125, 190. — angulosa, 190. — atra, 78, 125, 190. — cenisea, 190. — chlarona, 125. — glaucoma, 190. — Hageni, 125. — intermutans, 190. — Mougeotioides, 190. — piniperda, 125. — rugosa, 125, 215. — sambuci, 125. — scotoplaca, 190. — subcarnea, 190. — subfusca, 78, 125, 190. — sulphurea, 190. — varia, 125. — vyariabilis, 190. Lecidea albo-atra, 79, 191. — elxeochroma, 79, 126, 192. — fusco-atra, 192. — gemmata, 192. — geographica, 191. — levigata, 192. — leptocline, 192. — morio, 191. — petrea, 192. — portuensis, 192. — premnea, 79. — tabacina, 191. Lemna minor, 68. Leontodon hispidus, 43. Lepidium hirtum, 221. — latifolium, 65. Lepidophorum repandum, 245, INDICE ALFABETICO. 2) Leptogium lacerum, 192. — palmatum, 126. Leptopus boopis, 138. Leptothorax Rottenbergi, 110. — tuberum, 110. Leptynia hispanica, 47, 50, 270. Lepyronia coleoptrata, 140. Leucanthemum corymbosuin, 43. — vulgare, 260. Leucita, 105. Leucolita, 107. Leuzea conifera, 199, 259, — rhaponticoides, 199. Lictocoris campestris, 138. Lignito margoso, 175. Ligusticum pyrenaicum, 43. Ligustrum japonicum, 116. — vulgare, 44, 67. Limnea ovata, 68. — truncatula, 68. Limoniastrum monopetalum, 255. Limonita, 105, 176. Linaria alpina, 44. — amethystea, 166, 200. — cesia, 200. — cymbalaria, 156. — elatine, 166. — hirta, 200. — lanigera, 166. — melanantha, 200. — micrantha, 200. — nivea, 67. — saxatilis, 67. — spartea, 67, 166, 2 00. — spuria, 156. — viscosa, 166. — Zujarensis, 35. Linderna pyxidaria, 244. Linum angustifolium, 223. — austriacum, 207. — ®* Barrasil, 208. — maritimum, 223. — narbonense, 197, 209, 252, Linum spicatum, 214, — strictum, 197. — tenuifolium, 197. Liocoris tripustulatus, 139. Liogryllus campestris, 48, 272. Lithospermum apulum, 154, 200. — arvense, 154, 200. — fruticosum, 200. Lobelia urens, 257. Loboptera decipiens, 270. Locusta viridissima, 238, 272. Lolium perenne, 202. — temulentum, 202. Lonicera caprifolium, 257. — etrusca, 43. — hispanica, 66, 258. — implexa, 257. — pallida, 258. Lopus albomarginatus, 138. — flavomarginatus, 138. — sulcatus, 138. Loscosia aragonensis, 160. Lotus corniculatus, 66, 197. — decumbens, 224, — pedunculatus, 66, 197. — rectus, 197. — uliginosus, 40. Lupinus hispanicus, 66, 245. Lycium barbarum, 155. — europum, 187, 200. Lycopersicum esculentum, 155. Lycopsis arvensis, 67. Lycopus europzeus, 67, 200. Lycus, 131. Lygzonematus sp?, 206. Lygeus apuanus, 136. — equestris, 136. — familiaris, 136. — militaris, 136. — punctato-guttatus, 136. Lygeum Spartum, 202. Lygus campestris, 139. — pratensis, 139, 292 INDICE ALFABETICO. Lyonettia anthemoides, 261. Lysimachia ephemerum, 44. — vulgaris, 67. Lythrum salicaria, 100. Machairodus, 89. Macrauchenia patagonica, 88. Macrochloa arenaria, 68. — tenacissima, 202. Macrophya albicincta, 206. — blanda, 206. — crassula, 206. — diversipes, 206. — erythropus, 206. — postica, 206. — rustica, 206. Macrotylus * Fuentei, 32. — Herrichii, 139. — lutescens, 33. — nigricornis, 33. Magnesita, 106. Magnetita, 61, 64, 105, 148, 152. Majanthemum Convallaria, 252. Malus communis, 38. Malva egyptia, 223. — Alcea, 66. — hispanica, 197. — parviflora, 66, 197. — stipulacea, 39. — sylvestris, 66, 197. — Tournefortiana, 66. — trifida, 223. Mandragora autumnalis, 155. Mantis religiosa, 47, 270. Margotia gummifera, 245. Marrubium Alyssum, 251. — supinum, 200. — vulgare, 67, 168, 200. Mastodon Humboldti, 88. Mathiola tristis, 196, 214. Medicago falcata, 66, 197. — lupulina, 197. — sativa, 66, 197. Megalocerzea erratica, 138. Megalodontes ** Escalerai, 203. — flabellicornis, 203. — luteiventris, 203. Megatherium americanum, 85. Melandrium macrocarpum, 66. Melica ciliata, 202. : Melilotus leucantha, 197. — parviflora, 197. Melissa officinalis, 167. Mentha officinalis, 166. — pulegium, 67, 166, 200. — rotundifolia, 67, 166, 200. — sativa, 166. — sylvestris, 67, 166. — viridis, 166. Mercurialis tomentosa, 201. Merendera bulbocodium, 68, 201. Mesembriantemo, 130, 158. Mesembryanthemum nodiflorum, 96 Mespilus germanica, 38. Metriorrhynchus, 133. Mibora verna, 202. Mica, 96, 149. Micrelytra fossularum, 135, Microcnemum fastigiatum, 159. Micromeria Barceloi, 214. — filiformis, 214. — greca, 214. — inodora, 213. — nervosa, 214. — Rodriguezi, 214. Microlonchus Clusii, 259. — salmanticus, 66, 199. Micropus bombycinus, 199. — erectus, 259. — supinus, 199. Microtoma atrata, 136. Minuartia dichotoma, 198. Miridius quadrivirgatus, 138. Miris calcaratus, 138. — levigatus, 138. Mispikel, 103. Mnium undulatum, 65. INDICE ALFABETICO. Molasa, 175. Momordica Elaterium, 198. Monoplopus Idolon, 205. Montia rivularis, 40. Moricandia arvensis, 221. — Ramburei, 221. Moscovita, 64. Muscari racemosum, 252. Mutilla (Stenomutilla) argentata, 110, — barbara, 110. — (Myrmilla) Chiesii, 110. Myagrum perfoliatum, 196. Mylodon gracilis, 85. Myosotis intermedia, 117. — palustris, 67. Myriophyllum spicatum, 76. Myrmecocistus albicans, 109, — altisquamis, 109. Myrmica levinodis, 110. — rugulosa, 110. Myrtus communis, 76.. Nabis ferus, 137. — lativentris, 137. — viridulus, 137. Narcissus moschatus, 102. Nasturtium asperum, 221. — officinale, 65, 196. Nefelina, 105, Negundo fraxinifolium, 79. Nemobius lineolatus, 271. — sylvestris, 271. Nepa cinerea, 139. Nepeta Glechoma, 253. — nepetella, 167. Nerium oleander, 116. Neslia paniculata, 196. Nezara viridula, 134, Nicotiana glauca, 155. — Tabacum, 155. Nigella arvensis, 195. — damascena, 36. — hispanica, 36, Nogal, 187. Nonnea nigricans, 154. Notochilus contractus, 136. Notonecta glauca, 140. Nuphar luteum, 75. Ocimum Basilicum, 167, Ocnerodes Brunneri, 48. Octaedrita, 217. Odontites lutea, 166, — rubra, 200. — tenuifolia, 200. Odontoscelis fuliginosa, 133. Odynerus elegans, 115. — leevipes, 115. (Ecanthus pellucens, 48, 272. (Edaleus nigrofasciatus, 48, 271. (Edipoda Charpentieri, 271. — ccerulescens, 48, 271. — fuscocincta, 271. (Enanthe globulosa, 75. (Enothera speciosa, 212. Ofitas, 153. Oisanita, 107. Olea europea, 116. Oligisto, 61, 105, 153. Oligoclasa, 151. Olivino, 96. Omphalaria coralloides, 192. Omphalodes linifolia, 117, 200. Oncocephalus notatus, 137. Oncognathus binotatus, 139. Onobrychis matritensis, 197. — montana, 224, — sativa, 197. — saxatilis, 224. Ononis Columns, 224. — minutissima, 40. — Natrix, 197, 224. — procurrens, 66, 197. — sicula, 93. Onopordon acanthium, 199. — neryosum, 259. Onthophagus Amyntas, 33, 293 294 INDICE ALFABETICO, Onthophagus austriacus, 34. — Brisouti, 33. — dorsosignatus, 33. — Felschei, 33. — fracticornis, 34, — furcatus, 33. — Glasunowi, 33. — lemur, 34. — lucidus, 34, — marginalis, 34. — ruficapillus, 33. — taurus, 33, — truchmenus, 34. — vacca, 34. — verticicornis, 33. — Weisei, 33. Opalo, 96. Ophioglossum vulgatum, 251. Ophris apifera, 44. — aranifera, 201. Opuntia vulgaris, 116. Orchis incarnata, 44. — latifolia, 68. — laxiflora, 44, 68. — majorana, 167. — Morio, 252. — sesquipedalis, 44. Ornithogalum narbonense, 201. — pyrenaicum, 68. Orobanche amethystea, 200. — crenata, 256. — cruenta, 200. — densiflora, 246. — major, 256. — minor, 256. — Rapum-Genistie, 256. Oropimente, 114. Orthocephalus tristis, 42. Orthops Kalmii, 139. Orthotrichum cupulatum, 65, Ortosa, 64, 148. Oryssus abietinus, 205. Otospermum glabrum, 260. Ovis aries, 122. — capra, 122, Oxalis violacea, 245. Peonia Broteri, 65. Pallenis spinosa, 199. Palomena prasina, 134. — viridissima, 134. Pannaria muscorum, 125. — nigra, 187. Papaver argemone, 65, 196. — dubium, 196. — Rheeas, 65, 196. Paracinema tricolor, 47. Paratettix meridionalis, 271. Parietaria diffusa, 201. Paris quadrifolia, 253. Parmelia acetabulum, 65. — caperata, 77, 186. — conspersa, 77, 124, 186. — exasperata, 124. — isidiotyla, 186. — olivacea, 65, 77, 124. — prolixa, 186. — saxatilis, 65, 77, 124. — scortea, 77, 124. — tiliacea, 65, 124, 186. Parnassia palustris, 65. Paronychia argentea, 40, 198. — capitata, 198. Pecten, 172. — (Vola) quinquecostatus, — tripartitus, 62. Pediopsis scutellata, 140. Peganum Harmala, 197. Peltigera canina, 77. — rufescens, 186. Perdix rubra, 165. Periderza fuscata, 260. Peridoto, 105. Periploca grieca, 116, Perowskita, 103. Petroselinum sativum, 75, Petunia yiolacea, 155, INDICE Pencedanum officinale, 66. Phagnalon saxatile, 259, Phalangium bicolor, 100. Phalaris canariensis, 202. Phaneroptera quadripunctata, < Pheidole pallidula, 110. Phelipzea ccerulea, 200, Phenacita, 103. — pratense, 202. Phlomis herba-venti, 67, 200. — lychnitis, 168, 200. — purpurea, 168, Phlyctis argena, 191. Phragmites communis, 68, 202. Phyllirea angustifolia, 116. — latifolia, 116. Phymata crassipes, 137. Physalis Alkekengi, 155. Physcia adglutinata, 125. — aipolia, 187. cresia, 187. leptalea, 187. obscura, 125, 187. parietina, 65. pulverulenta, 124, 187. stellaris, 77, 125. Phytocoris Pini, 138. — Populi, 138. — Ulmi, 138. — varipes, 138. Picridium vulgare, 261. Piezocranum ** seminulum, 31. — simulans, 31. Piezodorus incarnatus, 134. Pimpinella magna, 66, Pinardia coronaria, 260. Pino, tile (3% 124, Pinus sylvestris, 68. Pirargirita, 104. Pirates hybridus, 137. — strepitans, 137. Pinitas 152).221- Pirolusita, 80. io ie) ALFABETICO. | Piroxeno, 151-153. Pisidium nitidulum, 68, Pizarras, 227. Placodium callopismum, 78, 188. candicans, 78. canescens, 78. — chlorophanum, 188. circinatum, 78, 189, fulgens, 78, 187. murorum, 78, 188. subcircinatum, 189. — symphageumn, 188. teicholytum, 78, 189. Plagioclasa, 64, 95, 148, 153. Plagiolepis pygmizea, 110. Plagiognathus arbustorum, 139. — viridulus, 139. Planorbis limophilus, 68. — metidgensis, 68. Plantago albicans, 168, 201. amplexicaulis, 168. — arenaria, 168. — coronopus, 67, 168, 201. — cynops, 201. — Jagopus, 168. — lanceolata, 67, 2 major, 168. montana, 168. psyllium, 168, 254. — serraria, 168. — subulata, 67, 251. Plantanthera bifolia, 44. Platycleis grisea, 48, 272. — intermedia, 48. — tessellata, 272. : Platy phyma Giorne, 48, 271. Platy plax Salvi, 136. Platysma szepincola, 124. Plumbago europzea, 67, 201, 255. Poa annua, 202, Podisus luridus, 134. Podops inuncta, 133. Podospermum Jaciniatum, 199, 295 296 INDICE ALFABETICO. Peeciloscytus holosericeus, 139. — vulneratus, 139. Peecilosoma Klugi, 206. Polygala monspeliaca, 196, 222. — rosea, 40. — rupestris, 222. Polygonum aviculare, 68, 201. —— Bellardi, 201. — hydropiper, 253. — persicaria, 68, 253. Polypogon Monspeliensis, 202. Polystichum Filix-mas, 45. Ponera contracta, 110. Populus alba, 68, 126. Poérfido, 149, 228. — cuarcifero, 149. — epidotifero, 150. — feldespatico, 151. -— pegmatitico, 150. Potentilla anserina, 253. — argentea, 66. — hirta, 37. — reptans, 37, 66, 198. — Tormentilla, 66. Poterium dioicum, 37. — mauritanicum, 37. — muricatum, 37. — sanguisorba, 198. — Spachianum, 66. Pristiphora fausta, 206. Prolongoa pectinata, 199. Prostemma guttula, 137. Prunus spinosa, 38, 66. Psallus albicinctus, 139. — ancorifer, 139. — simillimus, 139. Psora acervulata, 191. — decipiens, 79, 126, 191. — lurida, 126, 191. — testacea, 79, 191. Psoralea bituminosa, 197, 253. Pteris aquilina, 45, 65, Pteronus miliaris, 206. Pteronus testaceus, 206. Ptychotis ammoides, 75. Ptyelus lineatus, 140. — spumarius, 140. Pulicaria angustifolia, 260. — arabica, 67, 260. — dysenterica, 260. — odora, 260. — sicula, 260. — vulgaris, 260. Punica granatum, 76. Pycnogaster Bolivari, 236. — ** brevipes, 235. Pygidicrana Nietneri, 98. Pygolampis bidentata, 137. Pyrenopsis lecanopsoides, 192, Pyrethrum corymbosum, 260. — Parthenium, 199, 260. — sinense, 260. Pyrgomorphe grylloides, 48. Pyrrhocoris apterus, 136. Pyrus communis, 37. Querargira, 104. Quercus coccifera, 201. — ilex, 201. Queria hispanica, 198. Radiolites Sauvagesi, 62. Radiolites (Spheerulites) Saxonicze, 62. Ramalina calicaris, 77, 124. — pollinaria, 124, 186. — polymorpha, 186. Ramburia hispanica, 48. Ranunculus acetoselleefolius, 36. — acris, 36, 65. — adscendens, 36, — aquatilis, 65. — arvensis, 36, 195. — bulbifer, 220. — bulbosus, 34, 220. — — yar. rotundifolius, 36. — bullatus, 36. — carpetanus, 39, INDICE ALFABETICO. Ranunculus confusus, 36, 220. — flammula, 65. — gramineus, 195. — hederaceus, 35. — hirsutus, 36. — muricatus, 36. — parviflorus, 36. — peltatus, 36, 102. — repens, 36. — Sardous, 36. — sceleratus, 195. — trichophyllus, 220. — trilobus, 36. Raphanus Raphanistrum, 196. Rapistrum orientale, 213. — rugosum, 196. Reduvius personatus, 137, Rejalgar, 105. Reseda alba, 196. — lutea, 196. — luteola, 65, 196. — Phyteuma, 196. — virgata, 196. Retama spherocarpa, 197, 224. Rhagadiolus stellatus, 199, 261. Rhamunus lycioides, 223. Rhaphigaster grisea, 134. Rhus coriaria, 223. Rhyparochromus chiragra, 136. Rinodina confragrosa, 190. — contribuens, 190. — exigua, 78, 125, 190. -— lecanorina, 190. — sophodes, 190. Romulea bifrons, 246. Rosa canina, 37, 66, 198. — centifolia, 37. — gallica, 37. — semperflorens, 37. — sempervirens, 37. — sepium, 37. — spinosissima yar, aurora, 37, Rosita, 107. Rosmarinus officinalis, 167, 200. Rubia peregrina, 66. — tinctorum, 198. Rubus amcenus, 37. — discolor, 37, 198. — fruticosus, 198. — ideeus, 66. — thyrsoideus, 37. Rumex amplexicaulis, 39. — bucephalophorus, 68. — papillaris, 68. Ruscus aculeatus, 201. — hypoglossum, 253. Ruta montana, 197, 253. Sacculina carcini, 51. Sagina apetala, 40. — Reuteri, 222. Sal comin, 73, 231, 261. — gema, 104. Salda Coksii, 138. Salicornia fastigiata, 159. — herbacea, 160. Salix viminalis, 68. Salsola vermiculata, 201. Salvia argentea, 166, 200. — hispanorum, 200. — horminum, 167. — oblongata, 167. — pratensis, 200. — sclarea, 166. 297 — verbenaca, 67, 167, 200, 214. — verbenacoides, 167. — viridis, 167. Sambucus ebulus, 66, 258. — nigra, 66, 258. Samolus Valerandi, 255. Santolina chamecyparissus, 199, — rosmarinifolia, 67, 199. Saponaria ocymoides, 35. — officinalis, 66, 196, 222. — vyaccaria, 196. Saprinus algericus, 30. — ** calatravensis, 30. 298 INDICE ALFABETICO. Saprinus vulgaris, 224. Satureja hortensis, 167. — montana, 167, 200. Saxifraga ceespitosa, 39. — Camposii, 41. — cuneata, 42. — exarata, 76. — granulata, 40, 252. — nervosa, 40. — obtusifida, 43. — paniculata, 39. — Pentadactylis, 40. — Tridactylites, 40, 76. —- trifurcata, 41. — valentina, 42. — Willkommiana, 39, 40. Scabiosa columbaria, 198. —- maritima, 258. — Monspeliensis, 258. — stellata, 258. Scandix australis, 75, 198. — hispanica, 198. — Pecten-Veneris, 75, 198. Scelidotherium magnum, 86. — sp?, 85. Schizoceros furcatus, 206. Scilla monophyllos, 100. Sciocoris macrocephalus, 134. — terreus, 134. Scleranthus annuus, 66. Selerochloa dura, 202, Scolopendra, 254. Scolopendrium Hemionitis, 254. Scolymus hispanicus, 67, 199, 261. — maculatus, 261. Scorzonera graminifolia, 199. — hispanica, 199. Scrophularia aquatica, 156. — canina, 67, 156, 200. — frutescens, 156. — oxyrrhyncha, 35. — sambucifolia, 156. — scorodonia, 156. Seampadita, 108. Sedum album, 66, 198. — amplexicaule, 40, 66, — glandulosum, 215. — hirsutum, 40. — hispanicum, 66. — micranthum, 40. — Telephium, 251. Selandria serva, 206. — stramineipes, 206. Selenita, 128. Sempervivum tectorum, 198, 251. Senebiera coronopus, 102, 221, 251. Senecio aquaticus, 244. — crassifolius, 213, —-Durieui, 67. — foliosus, 67. — gallicus, 199, 244, 260. : — hydrophilus, 244. — Jacobzea, 260. | — linifolius, 260. . — vulgaris, 199, 259. . Sepiolita, 106. | Serapias pseudo cordigera, 68. | Serratula flavescens, 199. 7 Sherardia arvensis, 257. Siderita, 105. Sideritis hirsuta, 200. — incana, 200. — romana, 168, 214. — scordioides, 168. Sienita, 148. Silene arvensis, 222. — bipartita, 196. — ciliata, 40. — conica, 197. — conoidea, 197. — geniculata, 39. — inflata, 101, 197. — legionensis, 66, 222. — maritima, 101. — muscipula, 197. — nocturna, 197. INDICE ALIPABETICO. Silex, 176. Silicato de hierro, 69. Silybum Marianum, 199, Sinapis incana, 196. — nigra, 196. Sisymbrium Column, 196. — Trio, 196. — Sophia, 196, 254. Smilax aspera, 201, 253. Smyrnium olusatrum, 75, 198. Solanum bonariense, 154. — dulecamara, 67, 154, 200. — jasminoides, 156. — Melongena, 155. ' — miniatum, 154. — nigrum, 67, 154, 200. — sodomeum, 155. — tuberosum, 155. Solidago virga-aurea, 252. Soliva nasturtiifolia, 244. — sessilis, 244. Sonchus arvensis, 261. — asper, 67, 261. — oleraceus, 261. Spartium junceum, 197. Sperguia pentandra, 197, 222. — diandra, 222. — rubra, 197. Spheerulites squamosus, 62. Sphingonotus ccerulans, 48, 271. Spirzea filipendula, 40, 251. — ulmaria, 66, 251. Squamaria crassa, 78, 187, 215. — lentigera, 78, 125, 187, 215. — saxicola, 78, 125, 187. —- sulphurascens, 187. Stachys annua, 167. — arvensis, 167. — germanica, 167. — hirta, 167. — recta, 167. Statice corsyrensis, 214. — echioides, 201, Stauronotus Genei, 48, 271. — maroccanus, 162. Stellaria media, 40, 222. Stenobothrus Antigai, 272. — bicolor, 48, 271. — binotatus, 48, 271. — festivus, 271. — grammicus, 47, 271. — jucundus, 48, 271. — lineatus, 271. — minutissimus, 48, 271. — morio, 271. — nigromaculatus, 271. — parallelus, 48. — pulvinatus, 48, 271. — Raymondi, 271. — rufipes, 271. — Saulcyi, 271. — stigmaticus, 47, 271. — vagans, 48, 271. Stenocephalus agilis, 135. — neglectus, 135. 299 Sternbergia colchiciflora, 195, 201. Stipa capillata, 202. — Lagasce, 68. — pennata, 202. Stiroma Pteridis, 140. Strongylogaster cingulatus, 206. Stygmus pedestris, 136. Succinita, 107. Sulfuro de bario, 144. — calcio, 144. — estroncio, 111, 144. — plata, 70. — zinc, 144. Sus scropha, 122. Symphoricarpus racemosus, 258. Symphytum tuberosum, 117. Syromastes marginatus, 135. Tamarix gallica, 198. Tanacetum microphyllium, 260 — multifidum, 260. Tanita, 218, 300 INDICE ALFABETICO. Tapinoma erraticum, 110. Taraxacum dens-leonis, 261. — obovatum, 199. — taraxacoides, 261, — tomentosum, 261. Teesdalia lepidium, 221. Tefrita, 94. Telephium Imperati, 198. Tenthredopsis Beuthini, 206. — lasia, 206. Terebratula, 62. Tetramorium ceespitum, 110. Tettigonia brunnea, 141. — impreso-punctata, 141, — virescens, 141. — viridis, 140. Tettix depressus, 271. — Nobrei, 271. Teucrium capitatum, 168, 200. — chameedrys, 44, 200. — flavum, 168. — lanigerum, 201. — polium, 67, 168, 201. — pseudochameepithys, 168, 201. — saxatile, 35. — scordium, 254. — scorodonia, 67. — spinosum, 168. Thalackerita, 103. Thalictrum minus, 254. — tuberosum, 102, 220. Thapsia decussata, 75. — villosa, 75, 198. Thenardita, 74, 265. Therapha Hyoscyami, 135. Thesium alpinum, 201. Thlaspi arvense, 196. Thrincia hirta, 199, 261. — hispida, 199. — tuberosa, 67. Thrixion halidayanum, 49. Thy mela elliptica, 195, 201. Thymus algeriensis, 208. Thymus bracteatus, 207. — crespititius, 207. — clandestinus, 208. — coloratus, 208. — granatensis, 208. — mastichina, 67, 167, 201. — Mumbyanus, 208. — serpylloides, 208. — serpyllum, 67, 252. — vulgaris, 125, 167, 201. — Zygis, 67, 167, 201. Thyreonotus corsicus, 48, 272. Tiphia femorata, 115. Titanita, 105. Toba, 95. — palagonitica, 94. Tolpis beetica, 261. Tomostethus funereus, 206. Toninia candida, 79, 191. — manmillaris, 79, 191. — squalida, 191. — subtabacina, 191. — tabacina, 79. — vesicularis, 79, 191. Tordylium maximum, 75, 198. Torilis infesta, 75. — nodosa, 198. Toxodon, 88. Trachelium cceruleum, 256. Trachelus tabidus, 205. Tragopogon crocifolius, 199. — porrifolius, 199. — pratensis, 199. Trichalus, 133. Trichera arvensis, 66, 198. — subscaposa, 66, 198, Trichonema anceps, 246, — coronatum, 246. Trifolium angustifolium, 224. — arvense, 66, 197. — Cherleri, 197. — hirtum, 197. — lagopus, 197. INDICE Trifolium ochroleucum, 66. — pratense, 66, 197. — procumbens, 66. — repens, 197. — scabrum, 197. — tomentosum, 197. Trigonella gladiata, 197. — monspeliaca, 197. — polycerata, 197. Triguera ambrosiaca, 155. Triphleps levigata, 138. — nigra, 138. Trisetum bidentatum, 214. — Cayanillesii, 214. — Loeflingianum, 214. — ovatum, 68. Tristactus ** punctatus, 203. Triticum sylvaticum, 202. Triton, 96. Trixago apula, 166, 200. Trochus, 96. Tuberaria variabilis, 65. _Tulipa Clusiana, 252. Tuponia Hippophes, 139. Turgenia latifolia, 198. Tussilago farfara, 259. Tylopsis liliifolia, 272. Tylostoma, 172. Typha latifolia, 68, 202. Typotherium cristatum, 88. — sp?, 88. Ulex Jussieui, 102. — micranthus, 244. — parviflorus, 214. Ulexita, 105. Ulmus campestris, 68. Umbilicus gaditanus, 215. — pendulinus, 66. Urceolaria actinostoma, 191. — scruposa, 79, 126, 191. — Villarsi, 79, 191. Urospermum picroides, 261. Urtica dioica, 68, 201. ALFABETICO. 301 Vad, 108. Valeria rigida, 222. Valerianella coronata, 198, 258. — echinata, 198. Velezia rigida, 197. Velia currens, 137. — rivulorum, 137. Verbascum pulverulentum, 67, 155. — sinuatum, 155. — thapsus, 155. — virgatum, 155. Verbena officinalis, 67, 168, 200. — supina, 67, 168. Verlusia rhombea, 135. Veronica agrestis, 155. --- americana, 245, — anagallis, 67, 155, 200, 245, 253. — arvensis, 155, 250. — beccabunga, 67, 200, 245. — cymbalaria, 200, — didyma, 155. — fruticulosa, 44. — hederefolia, 155, 200. — Jabalambrensis, 207. — Michauxii, 245. — officinalis, 43. — punctata, 245. — saxatilis, 44. — serpyllifolia, 67, — tenuifolia, 43. Verrucaria conoidea, 79, — Dufouri, 79. — muralis, 126. -— myriocarpa, 79. -— nigrescens, 192. — obfuscans, 79. — purpurascens, 79, — rupestris, 192. — Schereri, 79, 192. Vespertilio pipistrellus, 62. Vesubiana, 106. Viburnum Lantana, 253. — Tinus, 258, b09 INDICE ALFABETICO. Wollastonita, 103. Xanthium macrocarpum, 199, 257. — spinosum, 199, 257. — strumarium, 257. Xanthophyliita, 1 Xa ria candelaria, 125, — parietina, 78, 125, 187. Xenotima, 103. Xeranthemum cylindraceum, 199. Xiphidium fuscum, 272. _ Xylotilo, 103. — Yeso, 106. | ‘Zicrona ccerulea, 134. Zinnia elegans, 260. Zoisita, 106. Zophosis Alborana, 96. Vicia angustifolia, 66. ' — onobrychioides, 66, — parviflora, 224. — purpurascens, 224. — sativa, 66. & — striata, 207. | Vinea media, 116. Viola Montcaunica, 39. — odorata, 65. ile — palustris, 65. — tricolor, 65. Vitis vinifera, 197. Volastonita, 107. Vulpia ciliata, 214. Wahlenbergia hederacea, 43. Wangenheimia Lima, 202. Withania somnifera, 156. a 7 D1 Vicesecretario , JosE Maria Dusmer. ra Hn 1226 ts wets tpae saab emagpt shed iat ebs: CeBIT eae. 6 er : DLL} L2 sb peepee er i SS Sno his he ttn hiamhubh eis tot shat s Stanek Pie eeey