As ie DEL DE Serie III. Tomo XIV. (Con 17 láminas, 2 planos y 19 figuras en el texto, ) RO BUENOS AIRES * IMPRENTA Y CASA EDITORA 259 — CALLE ALBERTI — 259 1911 DIRECTOR DEL MUSEO NACIONAL DOCTOR FLORENTINO AMEGHINO SECRETARIO Y BIBLIOTECARIO * AGUSTÍN J. PENDOLA + E DER E ” +. - re / > 4 4 di M ki a un px e 4 ANALES DEL MUSEO NACIONAL DE HISTORIA NATURAL DE BUENOS AIRES DIRECTOR DEL MUSEO NACIONAL DOCTOR FLORENTINO AMEGHINO SECRETARIO Y BIBLIOTECARIO AGUSTÍN J. PENDOLA ANALES MUSEO NACIONAL a ro BUENOS AIRES Serie III. Tomo XIV. (Con 17 láminas, dos planos y 19 figuras en el texto. ) BUENOS AIRES IMPRENTA Y CASA EDITORA «JUAN A. ALSINA >» 259 — CALLE ALBERTI — 2059 1911 ÍNDICE. Pas. SruckerrT, Teoporo, Tercera contribución al conocimiento de las Grami- náceas Argentinas. Con 4 láminas.—(15 de Mayo de 1911)........ Canu, FernIvaND, Iconographie des Bryozoaires fossiles de Argentine. (Deuxiéme partie). Con 12 láminas.—(26 de Junio de 1911)...... DabreNE, Roberto, Sobre la existencia del Huemul de Bolivia y Perú, Odocoileus (Hippocamelus) Antisensis (Orb.) y del Avestruz pe- tizo Rhea Darwini Gould en el N. W. de la República Argentina. Conrilamina— (2d o lala ae Carposo, AniBaL, Buenos Aires en 1536.—(29 de Julio de 1911)........... Mercante, Vícror, Variación del Índice Cefálico según el sexo y la edad.— fade Acoso do IS sonduodoncasrdccno tano dador oodoo soc nepo ar AMBROSETTI, JUAN B., Ídolo zoomorfo del Alto Paraná, Contribución á la Etnología Americana.—(25 de Agosto de 1911).................... Ricuaroson, Harrier, Isopodes du Sandwich du Sud.—(25 de Agosto de 1911). Cuevreux M. Ep., Sur quelques Amphipodes des Iles Sandwich du Sud.— (20 de Aaa oo Mi ooo oooobo soon ooo odo abr O O — Algunos animales marinos de las Islas Sandwich.—(25 de Agosto do OM orasrororo contaba HO DOO OSO ae oO O OO OSO Bouvier, M. E. L., Pycnogonides.—(26 de Agosto de 1911)............... 215 293 309 NOTA.—Las fechas indican el dia en que fueron puestas en circulación las publicaciones correspondientes, impresas aparte. A AN TERCERA CONTRIBUCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS GRAMINACRAS ARGENTINAS POR TEODORO STUCKERT. Nuevamente transcurrieron algo más de dos años desde que se publicó mi segunda contribución al conocimiento de las graminá- ceas argentinas, y he aquí otra aglomeración de material determi- nado, formando un volumen suficiente para un nuevo tomo. El interés que nos ha sido demostrado por la segunda contribución fué igual al que se nos defirió por la primera parte, de modo que juzgamos tal vez con razón y por analogía, que el interés para la tercera contribución siga aun creciendo. También ahora, como antes, todas las determinaciones y diag- nosis de formas, variedades y especies, ya anteriormente descrip- tas, ó nuevas, son concebidas por la inteligencia y el celo del es- clarecido sabio agrostógrafo Profesor doctor Eduardo Hackel, quien gentilmente nos las proporcionó para ser publicadas. Expresámosle aquí, una vez más, nuestras fervientes gracias, las del doctor Miguel Lillo, de Tucumán y las mías, por la bene- volencia y el esmero demostrados en favor de la ciencia botánica, en beneficio de los cultivadores de ella y en el de los argentinos. Vamos pues investigando, recorriendo nuevos territorios y á medida que adelantamos en el conocimiento y esclarecimiento de esta familia, vemos retrospectivamente que habiamos dejado algu- nas especies omitidas, las que no han podido ser reencontradas y otras reapareciendo con nuevos nombres. Puede observarse, por ejemplo, que siete especies que Grisebach en sus Symbolae describió como nuevas especies, resultaron ya conocidas con diferentes denominaciones, las que son: Ana. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. x1V. FeBreERO 22, 1911. 1 2 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Agrostis laxiflora «Rich. var. aristata Gris. = Agrostis montevi- densis Spr. var. aristata Doell. Airopsis millegrana Gris. = Sporobolus brasiliensis (Raddi) Hackel, Coleataenia gynerioides Gris. = Panicum Prionitis Nees. Hordeum compressum Gris. = Hordeum stenostachys Godron. Halochloa acerosa Gris. = Monanthochloé littoralis Engelm. Pappophorum saccharoides Gris. =Pappophorum alopecuroideum Vahl. et Pappophorum mucronulatum Nees pro partes. Setaria globulifera (Steud.) Gris. = Setaria Onuwrus (Willd.) Gris. Aparte de haber encontrado un bucn número de gramas, que hasta la fecha sólo eran conocidas de paises limitrofes de la R. A. ó sea de Chile, Uruguay, Paraguay y Brasil, las cuales citaremos en su debido lugar, nos llamó preferentemente la atención las halladas, que habian sido considerado antes como originarias de otros paises lejanos, por ejemplo: como de la AMÉRICA BOREAL, in- clusive México: Aristida humboldtiana Trin.; Aristida longiseta Steud.; Bouteloua vestita (Wats.) Scribn.; Eragrostisneo-mexicana Vasey.; Panicum hirticaulum Pres], como de Europa las especies: Avena ludoviciana Dur.; Briza maxima L.; Calamagrostis neglecta Beauv.; Deschampsia caespitosa P. Beauv. y las variedades si- guientes: Agropyrum repens Gaertn. var. maritimum Koch. Aristida Adscensionis L. var. pumila Coss. y Durand. Bromus hordaceus L. var. leptostachys Beck. Lolium temulentum L. var. macrochaeton A. Br. Phragmites communis rin. var. flavescens Custer. Tragus racemosus Hall. var. biflorus Hackel. Triticum vulgare Vill. var. albidum Alefeld. Triticum vulgare » var. erythrospermum Koerner. Podría reprochársenos de repetir muchas de las especies men- cionadas ya en las contribuciones anteriores; á lo que objetamos, que este reproche, hasta cierto punto no carece de fundamento, pero que se hizo para obtener mayor alcance de supervisión en lo existente y para poder intercalar en su respectivo lugar, no sólo STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 3 las referencias de las nuevas adquisiciones, sino para hacer conocer por ellas la mayor expansión en su área geográfica. Esta vez, igual que en las contribuciones anteriores, un buen contingente de ejemplares muy interesantes, inclusive algunos nuevos para la ciencia, compuesto de miembros de esta familia, procedentes en su mayoría de excursiones á altitudes hasta 5,000 metros en las Cordilleras de la Provincia de Tucumán, nos fueron remitidos por el doctor Miguel Lillo, de la capital de aquella Provincia. Una respetable porción de ejemplares recolectadas por el doctor Nicolás lllin en el territorio del Chubut, recibido por intermedio del doctor F. Kurtz, habiéndose el doctor Hackel ga- lantemente hecho cargo de efectuar sus determinaciones. Un crecido número de ejemplares nos proporcionó el señor Ma- rio Estrada, ingeniero agrónomo de Buenos Aires, quien los colee- cionó en diferentes viajes que efectuara en las Provincias de Bue- nos Aires, Córdoba, Catamarca, etc. También nos facilitó para su estudio el doctor Nicolás Rojas Acosta, como lo hizo ya anteriormente, un voluminoso contingen- te de ejemplares provenientes de la Colonia Benites y de Resis- tencia, Bastantes muestras proceden de la bondad de la Profesora señorita Hortensia Murcenaro, de la Colonia Margarita Belén (Chaco). Fuéronnos también enviados por el Sr. Máximo Burcco, de la estancia Santa Rita, Estación Vela, F. C. $S., Sudoeste del Tandil, Prov. B.-A. algunas muestras, por las que viene á ensan- charse el conocimiento de la distribución geográfica de algunas es- pecies. Pocos ejemplares nos trajo el ingeniero Sr. Enrique Cáceres, recolectados en 1903 durante su estadía en Rio Gallegos, territo- rio de Santa Cruz. Otros cuantos nos fueron entregados por el doctor Cristóbal M. Hicken, coleccionados en varios puntos. Otros pocos nos fueron enviados por el Sr. Oscar Roth, de Ua- nals, Prov. Córdoba. Igualmente nos remitió de Buenos Aires gra- mas que crecen espontáneamente en el Parque 3 de Febrero, el director del jardín botánico señor Carlos Thays. También nos proporcionó un corto número de ejemplares nues- tro amigo Don Segundo GFonsález, de Cañada Alegre, Dep. Burru- yacu, Prov. Tucumán. En cuanto á mi propio concurso material para conseguir dar mayor extensión á la presente exposición por medio de nuevas colecciones, efectué en Diciembre 1906 y Enero 1907 varias ex- 4 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. cursiones por las cercanías de Córdoba, alcanzando hasta las cum - bres de la Sierra Chica, emprendiendo en Febrero y Marzo del mismo año un viaje de varias semanas, por Dean Fúnes, Cruz del Eje, Serrezuela y Tello y de ahí hasta la estancia «La Diana», Dep. San Martín, Prov. de La Rioja. Esta estancia es propiedad de mi amigo Federico Schmaedke, quien nos hospedó muy amable- mente, nos acompañó y puso á nuestra disposición, para todas las excursiones, cuantos viveres y cabalgaduras hubimos necesitado. Las varias salidas que efectuábamos fueron bastante provechosas, principalmente la excursión á la Sierra de Ulapes. Habíamos pro- yectado extender nuestra gira hasta Mascasin, límite con la Pro- vincia San Juan, pero un tiempo lluvioso nos obligó á retirarnos á «La Diana», desistiendo de nuestro propósito. En Abril 1905 mi amigo Schmaedke efectuó un viaje de cinco días para coleccionar plantas por Chepes, Ambil y la Quebrada de Chelco (Prov de la Rioja), cuyo viaje casi le costó la vida, debido ásu empeño en pasar un arroyo crecido, pero por cuya compila- ción resultaban algunos números citados. Debido al postrado estado de mi salud, no me fué posible efec- tuar grandes excursiones en los meses de verano 1907-1909 que me hubieran permitido recoger personalmente mayor acopio de materiales, limitándome tan sólo á cortas salidas en los alrededo- res de Córdoba y á varios viajes á Villa María, Estaciones Dalma- cio Vélez, Carnerillo, Río Cuarto y sus alrededores, En cambio he obtenido de mis colaboradores valiosísimas y abundantes colecciones, las que en cierto modo compensan mi propia inactividad. Recién á mediados de Diciembre de 1909 pudimos emprender una excursión desde Córdoba, por Santa María y Tanti, á la estan- cia de «La Pampa de San Luis», ubicada en la Sierra de Achala á 2,000 m. de altitud. Cuyo resultado, á pesar del pésimo estado del tiempo, que entonces reinaba, pudimos sin embargo, llamar bas- tante satisfactorio. Aprovecho esta ocasión para agradecer sinceramente á cada uno de mis coayudantes por el celo y el afán que han desplega- do en fayor de una causa de interés general, buena y útil. Para mayor claridad y más precisión, hemos dispuesto enumerar esta vez únicamente las especies válidas, á las que, en continua- ción de cada una, hemos agregado sus formas, variedades ó subes- pecies y para facilitar la comparación con las anteriores, añadimos los números que tuvieron (a, para la I; b, para la II). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 5 Hemos podido intercalar en el presente trabajo los dibujos de algunas especies nuevas, para su mejor ilustración. Quedaron también sin determinarse una serie de especies criti- cas, para las que se precisa la confrontación de ejemplares típicos de los grandes herbarios normales y la revisión amplia de la lite- ratura del ramo. Buscaremos de proseguir las averiguaciones, publicando su re- sultado en debido tiempo. Córdoba, Suburbios General Paz, Calle Félix Frías 1.” 260.—31 Debre. de 1910. El autor. St. mi? Lillo n.* EN. L) (M. E.) (M. B.) (N. R. A.) (A. M, (18,151) (CAMEL) (O. E.) (E. C.) (C. T,) (S. G.) ABREVIACIONES USADAS. Stuckert, Herbario argentino N.* Dr. Lillo, Herbario tucumano N.* Dr. Nicolás lMlin — Herbario Chubut N.? Mario Estrada — B-A. Máximo Burecco — Vela, B-A. Dr. Nicolás Rojas Acosta, Col. Benites y Resisten- cla, Chaco. Prof* D.” Hortensia Marcenaro, Col” Marg. Belén, Chaco. Federico Schmaedke — «La Diana», Rioja. Dr. Cristóbal M, Hicken, Buenos Aires. Oscar Roth—Canals, Prov. Córdoba. Ingeniero Enrique Cáceres—antes en Santa Cruz, (Pk Set. 1910). Carlos Thays, Director del Jardín botánico, Bs. As. - Segundo Gonsález, Cañada Alegre, Dep. Burruyacu, Tucumán. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 7 IT. MAIDEAE. COIX L. y A. Coix lacryma Jobi Linwx. Linn. Hort. Cliffort. p. 437 (17137); E. Matoso, Cien. industr, p. 219 n” 408; T. Peckolt, Plant. med. é uteis do Brazi! (1891) p. 370; Nie- derlein, Result. bot. Mis p. 70. Syn: Coix lacrima Jobi Linn. sp. Plant. p. 972 (1753). Syn: Coix lachryma Velloso Flor. flumin x. tab. 3. Syn: Lithagrostis lacrima Jobi Gaertn. De fruct. tab. 1. fig. 10 (1788.) Syn: Sphaerium lachryma (L.) OK. Rev. 11. 793. (1891). N. y. Lágrimas de nuestra Señora, L. de Job., Biurí, Capim ro- sario, C. de contas, C. missanga (Bras.) St. n” 20,014 (15. 1 1909) cultivado en un jardín de Tucumán, regalo del Dr. M. Lillo. Grama que es considerada originaria de las Indias orientales, pero que se encuentra silvestre en muchos puntos, tanto de la Provincia Corrientes y del territorio de Misiones, como también en el Brasil, etc., y que en nuestros jardines en varias provincias del Norte de la R. A. se la cultiva como adorno. Planta de cañas erguidas y lisas, á veces ramosas, alcanzando á una altura de */2-1 m. Sus hojas envainantes son de 20-40 em. de largo por 1-3 cm. de ancho, con la nervadura dorsal blanquecina, La inflorescencia se presenta en espigas terminales ó axilares, más ó menos fasciculadas, siendo ocupada la parte superior por las flores masculinas y la inferior por las femeninas. El fruto es un cariopse semigloboso liso, de cáscara ósea, de color blanquizco ó ceniciento, del tamaño de una alverja, con la superficie algo ru- gosa y estirada en punta en una de sus faces. Los frutos maduros contienen bastante nitrógeno, por lo que se explica la importancia, que se les da como alimenticios en la fa- bricación de pan ó masitas hechas con su harina, para individuos flacos y estenuados. El cocimiento de sus frutos contusos es em- pleado al interior como diurético y la infusión de la planta verde en casos de retención de orina, y asi también como expectorante Ss MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. en la tísis y en otras afecciones pulmonares. Al exterior su coci- miento se usa en baños como excitante. Las semillas secas son empleadas por los católicos para fabricar rosarios y por los salvajes en una multitud de adornos, en forma de collares, pulseras, etc. 1. ANDROPOGONEAE. IMPERATA CYRILLO. 2. Imperata brasiliensis Trix. Trin. in Mem. Acad. Petersb. Ser. vi. vol, 2. p. 331 (1833); Hac- kel in Mart. El. bras. vol. 11. pars. 3. p. 251. t. 59. fig. 1. et in DC. Monogr. Phan. vol. vir. p. 95 (1889); Grah. Kerr. Exped. Pilcomayo p. 17; Peckolt, Plant. med. é ut. bras. (1891) p. 550; Arech. Gram. urug. 190 n* 1; Hassler, Flor. pilc. 1. 24; Syn: Saccharam sapé St. Hil. voy. dist. Diam. 1. p. 368 (1833); Syn: Imperata sapé N. J, Anderson in Oefvers. K. vet. Akad. Fórh. Stockholm (1855) p. 159; Syn: Imperata caudata Chapm. Suppl. Fl. South-stat. p. 668; N. v. Sapé (Bras.) Yahapé colorado, Y. - puigtá (Ch.) St. n? 16,029 (2 x. 1906) y 16,295 (26. xr. 1906) Colonia Benites, Chaco austral (N. R. A.) St. n* 16,289 (26. xr. 1906) de la misma localidad (N. R. A.) re- presenta un especimen magro y de hojas mas angostas, que las del tipo. Especie que florece en verano, Dic. - Marzo y que es bastante abundante en las costas del rio Paraná, prefiriendo terrenos subs- tanciosos y arenoso-húmedos. Sus cañas, sencillas y delgadas, se elevan de */, - 1 metro de al- tura. Las láminas son lineares ó lineareo-lanceoladas, bien puntia- gudas, hasta de 30 cm. de largo por 4-5 mm. de ancho. La panoja, bastante densa, mide de 8-15 cm. de largo, por 1, 5-2, 5 cm. de ancho. Las espiguillas son lineares hasta lanceoladas y presentan en la base una coloración algo rojizo-violácea, la que en el ápice se torna más pálida. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 5) Como forraje carece de importancia. Su dispersión geográfica es el Chaco, Formosa. (Urug. Parag., Brasil, Guyana, Venezuela y Centro América.) 3. Imperata eylindrica (L.) P. Beauv. P. Beauv. Essay. agr. p. 165, tab. 5 (18192). Syn: Lagurus cylindricus Lin. Spec. 120, var. condensata (SteuD). HAckEL. —Hackel nom. ined. in Monograph. Andropogonin DC. Phan. 94. (1b) Syn: Imperata arundinacea (L.) Cyr. l. c. var. condensata (Steud.) Hackel 1. c. 4. Imperata minutiflora Hackrz. Hackel in DC. Monogr. Phanerog. vr. p. 100 (1839); R. E. Fries, Ark f. Bot. Bd. 8. n* 8; Gramin. p. 32. Syn: Imperata caudata Gris. Symb. n” 1997, (non Trin.) fide M. Lillo. St. n* 18,828 ex Lillo n* 7,323 (14, x1r. 1907) margen del rio Sali, cerca de Tucumán. Planta semiacuática, poco social, que parece preferir arenas húmedas ó barro blando. Sus cañas graciosisimas alcanzan á veces hasta un metro de altura, pero no pasan en lo general de 50 cm.—Ligula minutisima. Láminas angostolineares de 10-20 em. de largo por 1,5-3 mm. de ancho, de color verde pálido. Panoja densa, lineal de 15-25 cm. de largo, enangostada en la base y en ella 1-2 cm. de ancho. Las espiguillas que ostentan, son las más pequeñas que se cono- cen en la tribu de las andropogóneas y no miden más que 1,5-2 mm. de largo; son de un color algo pardo y se las encuentra envueltas en una tupida capa de vellos cortos. Los caracteres y el hábito de esta especie son completamente distintos átodos los demás obser- vados en los del género; por lo que parece extraño, que el Dr. Gri- sebach haya podido confundirla con otra. 10 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Por ser de consistencia algo dura y no presentarse en abundan- cia, nO debe tener mayor rinde como forraje. Su dispersión geográfica es Tuc., Salta y Jujuy (Bol., Bras., Perú). ERIANTHUS (L. €. RICHARD.) MICHAUX. 5. Erianthus Trinii Hacker. Hackel, in DC. Monogr. Phan. vi 135 (1889); Arech. Gram. urug. 194 n* 1; Hackel, in Plant. hass]. 11, 361 (1903). Syn: Saccharum giganteum Trin. in Mem. Acad. Petersb. sér. 6. vol. 2, p. 311 ex p. Syn: Erianthus saccharoides Michx. Fl. bor. am. 1.55, var. Trini Hackel in Mart. € Eichl. Flor. bras. 2. pars. 3. p. 258. St. n* 17, 648 (12 vir, 1907) Resistencia, Chaco (N. R. A). Grama robusta que florece desde Febrero á Marzo. Ella es pro- pia de terrenos anegadizos de las márgenes del río Paraná y de otros, en donde forma en sociedad con otros pastos densos y ex- tensos matorrales. La altura de sus cañas alcanza á 2-3 m. y el largo de sus láminas lineares y puntiagudas es 4 veces más de 1 m. por 1-2 cm. de ancho, siendo la margen de ellas áspera y filosa. La panoja lincaroblonga tiene un largo de 30-40 cm. y forma una especie de racimo, que sale de una vaina foliar espatiforme, guarnecido de una multitud de espiguillas, cubiertas de una lana blanquizca. La ligula membranácea presenta una forma aovada, trunca y pestañosa. Como planta forrajera no ofrece mayor interés, pues su consis- tencia es dura, por cuya razón la hacienda la desdeña. Su dispersión geográfica debe considerarse como subtropical y citamos ahora esta especie de la R. A. por primera vez, habiendo ella sido indicada antes, como del Uruguay, Paraguay, Brasil, Co- lumbia y México. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. dd: ROTTBOELTLIA L. f. 6. (la, 2b.) Rottboellia compressa L. f. AN var. fasciculata (Lam.) HackeL. Hassl. Flor. pilc. 1. 25. St. n* 19035 (12. vir. 1908.) Parque 3 de Febr. Palermo, B. A. ET). 7. Rottboellia selloana Hacker. Hackel, in Mart. Flor. bras. 2 pars. 3, p. 312 et in DC. Monogr. Phan. ví. Andropog. p. 309; Arechavaleta, Gram. urug. p. 202 n0 1. lam. xxIv. Syn: Manisuris selloana (Hackel) OK. Rev. 11. 750 (1891). St. n* 20,496 (16. x11. 1909.) Villa García, cerca de Tanti, Dep. Punilla, Prov. Córdoba, entre piedras y arenas húmedas del arroyo Mojarras á 800 m. de altitud. St. n* 20,792 (19. xr. 1909) Quebrada de la Oyada, Estancia «Pampa de San Luis» Sierra de-Achala, pedanía Candelaria, Dep. Cruz del Eje, Prov. Córdoba, en arena húmeda, á 2,000 m. de altitud. Grama cespitosa, completamente lampiña. Rizomas multicaules. Cañas suberectas, achatadas, estriadas, de una altura de 30-50 cm.; ramas floríferas dos, cuatro ó más, solitarias, simples. Vainas estriadas, comprimidas, más largas que los entrenudos, hendidas. Lígula breve, membranácea, blanquecina. Lámina estrecha ple- gada por el medio en su parte inferior, puntiaguda, de 10-20 cm. de largo por 3-5 mm. de ancho, flácida, nervaduras poco marcadas. Espigas envainadas por la base, rectas ó subarqueadas, de 8-15 cm. de largo, verduzcas, á menudo de coloración rojizo-morada, artl- culaciones iguales. Las espiguillas sentadas con el pie en forma de anillo, cubriendo exactamente las excavaciones del ráquis, que les corresponden. Pajitas glumales lampiñas, duras, obtusas. Espiguillas peduncu- ladas, aplanadas de 1, 5-2 mm. Grama de consistencia blanda y de gran provecho como forraje, 7% 12 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. á pesar de no producirse en abundancia. La citamos por primera vez de la R. A., bien que otros colectores nos la indicaron de Entre Ríos y Santa Fe. Fué señalada como del Uruguay y del Brasil. TRACHYPOGON NEEs. 8. (29 b) Trachypogon Montufari (H. B. K.) Nzzs. ELIONORUS HumB. BoNPL. € WILLD. 9. (2a,3b) Elionurus candidus (Trix.) HackEL St. n* 19,050 (15 vr. 1908). Colonia Marg. Belén, Chaco (H. M.) St. n” 21,298 (1. 1. 1910). Vela, B-A. (M. B.). 10. Elionurus latiflorus Neres. Nees. apud. Steud. Synops. 1. 364 (1855); Hackel, in Mart, Flor bras. 11. 3. p. 307., et in DC. Monogr. Phanerog. vr. 336., etin Plant. hasslerianae ex Bull. herb. Boissier t. 1v (1906) p. 362; Peckolt, T., Plant. med. bras. 633 (1891); Hassler, Flor. pilc. 1. 25. Algunos autores la consideran como mera variedad del Elionmu- rus candidus (Tr.) Hackel. N. v. Capim manga do campo, Vetiver da terra (Bras.). St. n* 10,415 (3 x1L. 1901) Sierra Achala, C. á 2,000 m. alt. St. n* 15,968 y 16,024 (2.x 1906) Col. Benites, Chaco austral (No 07 St. n* 17,785 ex Lillo n” 5436 (3. 1. 1901) Cuesta de las Juntas, Dep. Tafi, Tuc. Planta robusta, cuyas cañas alcanzan 4 una altura de 50-150 em. Su inflorescencia representa una panoja espiciforme, ella es densamente guarnecida de espiguillas sesiles, las que á veces to- man un color rojizo. Mas bien desecada, que fresca, la planta exhala un olor á limón ó á cedrón, por lo que se la aprecia para ponerla entre la ropa de lana, con el objeto de preservarla de la polilla. La hacienda la desdeña como pasto. La citamos por primera vez de C. T. Ch. y Form. de la R, A., siendo indicada del Paraguay y Brasil. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 13 141. (4b) Elionurus viridulus Hacker. St. n* 20,049 (4. 1v. 1909.) en un campo quemado, al Sud del puente del F. C., Río IV. Prov. Córdoba. ANDROPOGON L 12. Andropogon coloratus Hackez. Hackel, nov. spec., nomen ad inter. Species ex affimitate 4. ¿ncano Hackel. N. v. Paja colorada. ae Material demasiado exiguo para poder atreverse 4 exponer una diagnosis. St. n” 20,275 (2. 1x. 1909) Colonia Benites, Chaco.—(N. R. A.). 13. (3a,5b) Andropogon condensatus Krn. var.genuinus HackeL, subvar. typicus Hacker. 14. (4ta,6 b) Andropogon consanguineus KrH. var, genuinus HackeEz. St. n* 17,188 ex Lillo n* 5,692 (12 11. 1907) en campos áridos por Tafi del Valle, Tuc. 4 2,200 m. de altitud. St. n” 18,680 (24, 111. 1908) Canals, Dep. M. Juarez, C.(O. R.). St. n” 20,059 (5. 1v. 1909) Carnerillo, Dep. Río IV. C. St. n* 20,535 (16. x1r. 1909) Villa Garcia, Tanti, C. St. n* 20,725 (18. x11. 1909) Est. Pampa S. Luis, Achala, C. á 2,000 m. alt. (1 b) var. humilior Hacker. 15. Ba, 8 b) Andropogon contortus L., GENUINUS. St. n* 18,610 (28. 11. 1908) Resistencia, Chaco (N. R. A.) (Ga, 9 b) var. secundus Hackez. N. v. Flechilla (Ch.) 14 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n” 17,141a (12. 111. 1907) Sierra de Ulapes, Rioja. St. n* 18,618 (28. 11. 1908) Resistencia, Chaco (N. R. A.). 16. Andropogon Hassleri Hackerz. Hackel in Bull. herb. Boissier, Sér. 11. vol. 1v. p. 266 (1904). Hassler, Fl. pilc. 1. 25. N. v. Tacuarillo (Chaco). St. n” 16,277 y 16,299 (26. xr. 1906) Colonia Benites, Chaco aus- tral (N. R. A.). Planta bastante vistosa de una altura de 1-1,5 m., cañas ergul- das, tiesas y lisas, hojas lineares de unos 20 cm. de largo por 5-6 mm. de ancho. Panoja densa de forma lanceolado-oblonga con sus espiguillas sesiles, muy parecida á la del A. saccharoides Sw. Prefiere campos húmedos ú orillas de acequias. Su calidad para el sostén de la hacienda es mediocre. Citamos esta especie por primera vez como de la R. A., Ch. y Form. habiendo sido descripta como del Paraguay. 17. (Sa, 11b) Andropogon macrothrix Trix. 18. Andropogon nutans L. (12 b) var. agrostoides (SpeG.) HackeL genuinus. Hassl, Fl. pilc. 1. 25. St. n* 18,611 (28. 11. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). N. v. Capii-sayú (Ch.). forma ad var. stipoidem vergens HackeL nov. forma. St. n” 18,546 ex Lillo n* 7,538 (12. 111. 1908) Cebil redondo, Dep. Tafi, cercanias de Tucumán. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 15 -(9a, 18b) var. avenaceus HackrL. (10 a, 14b) var. pellitus HackeL. N. v. Pasto de cañada (Ch.). St. n? 16,260 (26. xr. 1906) Col. Benites, Chaco (N. R. A.). » » 17,483 (16. 111. 1907) Est. La Sierra, Tornquist B. A. (ME. E.). St. n% 19,146 (30. vir. 1908) Col, M. Belén, Chaco (H. M.). » » 19,842 ex Lillo n” 6,632 (4. x1. 1903) Mocovi, Sta. Fe. » » 20,058 (5. 1v. 1809) Carnerillo, Rio IV, C. » » 21,296 (1. 1. 1909) Vela, BA. (M. B:). (lla, 16b) var. stipoides Hacken. 19. (l2a, 16b) Andropogon paniculatus KrmH. Hassl. Fl. pilc. 1. 25. St. n* 16,891 (29. 1. 1907) Las Rosas, La Falda, C. » » 18,568 (24. 11. 1908) Sierra de S. Ignacio, C. » » 18,809 (25. 1v. 1908) Las Rosas, l. e. 20,466 (16. x1r. 1909) Villa Garcia, Tant1, C. Y Y Forma ad A. consanguineum vergens HackeL, (17 b) var. elongatus HackeEL. St. n* 16,887 (29 1. 1907) S. Bernardo, La Falda, C. » 18,810 (28. 1v. 1905.) S. Bernardo, La Falda, C. Y 20. Andropogon saccharoides Sw. genuinus HackEL. Hackel, in DC. Phan. vr. 495 (1889). St. n” 19,843 ex Lillo n* 7,608 (11. 11. 1906) Tafi, Tuc. 16 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. subvar. submuticus Vasry. Vasey apud Hackel 1. c. St. n? 17,670 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). La especie genuina y la subvariedad mencionadas las citamos por primera vez como de la R. A., siendo indicadas como propias del Brasil y de la América boreal, (138 a, 18b) var. barbinodis (Lac.) HAckeL. St. n* 18,756 (16. 1v. 1908) Chelco, Rioja (F. $.). (14a, 19b) var. imperatoides Hacker. Hassl. Fl. pilc. 1. 25. St. n” 19,844 ex Lillo n* 322 (25. 111. 1887) Vipos, Dep. Trancas, Tue. forma ad var. brasiliensem Hack. vergens, Hackel nov. forma. (Hack. Andropog. Mon. Phan. vi. p. 495.) St. n” 21,760 (6. v. 1910) Casa Bamba, Sierra Chica, Córdoba. subvar. muticus HackeL nov. subvar. Differt ab varietate defectu aristae. St. n” 17,679 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). Nueva subvariedad que difiere de la variedad mencionada por la ausencia de aristas. (15 a, 20b) var. laguroides (DC.) Hackunz, Hassler, El. pil. 1. 25. St. n” 16,239 (21. xr. 1906) Los Cocos, Punilla, C. » » 17,186 ex Lillo nv 914 (25. x. 1888) Tuc. » » 18,827 > » » (1,294 (14. XII. 1907) Tuc. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 1 St. no 18,862 (19. y. 1905) Abundantísimo por Río I, C. » » 20,044 (4. 1v. 1909) Rio IV, C. (16 a, 21 b) subspec. leucopogon (Ners) Hackes. subvar. typicus HackeL. St. n* 11,334 (15. 1v. 1907) Sierra de Chelforó, Prov. B.A. (M. E.). » » 21,264 (20. xrr. 1909) Los Cocos, Punilla, C. (17 a, 22b) subvar. perforatus (Trix.) HackeL. St. n” 17,158 (12. 111. 1907) La Diana, Dep. S. Martín, Rioja. » » 19,845 ex Lillo n* 4,464 (20. v. 1905 ) Metán, Salta. » » 20016 (3-5. 1v. 1909) Río IV, Carnerillo, C. forma fusco=aristatus STUCKERT nov. forma. Differt ab subvarietate praecedente, aristis fusco-violascentibus fulgentibus, nec viridulis. St. n* 4,492 (17. 1v. 1593) Alrededores de Córdoba. » » 20,103 (19. 1v.:1909, Estancia Argué, Dep. Rio I, C. 21. Andropogon Salzmannii (Trix.) Hacken. Hackel, in F. Fedde, Rep. Nov. spec. regn. veg. Bd vi. p. 341 n? 2 ex herb. hassleriano, Novit. paraguariens. 1. Syn: Andropogon imberbis Hackel Flora 1x. v. 111. (1885) 119 et in DC. Monogr. Phan. vr. 315. var (. aristatus HAckEL. Hackel, in Fedde l. c. Syn: Andropogon imberbis Hackel var. %. genuinus in Arechav. Gram. urug. p. 218. (1 a, 10 b) Syn: Andropogon imberbis Hackel in St. Gramináceas arg. 1. in An. Mus. Nac. B. y A.t. xr. p.50 n” 7. et 11, in An. Mus. ANaL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xIv. Marzo 1.”, 1911. 2 18 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Nac. BA. t. xur p. 416 no 10; St. (4 más de los n', ya citados) el n? 16,892 a (29, 1. 1907). Las Rosas, por la Falda, Dep. Punilla, C. á 1,000 m. altitud. St. n” 20,502 (16. x11. 1909) Villa García, Tanti, Sta. María, C. » » 21,082 (20. x1r. 1909) Los Cocos, Punilla, C. » » 21,261-62 (23. x1r. 1909) Tanti, Sta. María, C. 22. (18 a, 23 b) Andropogon selloanus Hackez. St. n* 16,894 (29. 1. 1907) Las Rosas, La Falda, Córdoba. » » 18,331 (18. x11. 1907) Col. Benites, Chaco (N._K. A.). » » 21,100 (16. xt. 1909) Villa García, Tanti, C. 23. Andropogon Sorghum Bror. (24 b) var. cernuus Karw. (19 a, 25b) var. vulgaris Hacken. (26 b) subspec. halepensis (L.) Hacker. St. n” 18,644 (1. 11. 1908) La Diana, Dep. S. Martín, Rioja (F. $S.). » » 18,750(16.1v. 1905) Quebrada de Chelco, Rioja (F. S.). subvar. muticus Hackerz. Hackel in DC, Mon. Phan. vi. 502 (1889). St. n” 19,200 (1, x. 1908). Formosa, embocadura del Pilcomayo (E. "MZ. El). 24. (20a, 27b) Andropogon squarrosus L. f. 25. (21a, 285b) Andropogon tener Krn. St. n? 16,892 (29. 1. 1907). Las Rosas, La Falda, Córdoba. » » 17,119 (12, m1. 1907) en gran abundancia, Cerro de Mi- STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 1, nas, Sierra de Ulapes, Dep. San Martín, Prov. Rioja, á 1,200 m. al- titud. TT. ZOISIEAE AEGOPOGON P. BEaAUv. 26. (30b) Aegopogon tenellus Trixy. TRAGUS HaLL. 27. (22a, 31b) Tragus raceniosus (L.) Hann. var. berteronianus (SchuLr.) Hackez. St. n* 17,617 (4. v. 1907) Quebrada de Sebila cerca de Chum- bicha, Catamarca (M. E.). forma rubescens STUCKERT. nov. forma. Dijfert a typo spiculis rubescentibus. St. n* 18,139 (16. 1v. 1908). Estancia S. Teodoro, Rio I, Córdoba. var. biflorus Hacker. Hackel in Oestr. bot. Zeitschrift, p. 195 (1901). St. n* 17,198 (12. 1. 1907). Cerro de Minas, Sierra de Ulapes, Dep. San Martín, Prov. Rioja, 4 1,600 m. de altitud. St. no 17,198 a (12. 111. 1907) del mismo punto, representa una forma del racemosus, cercana á la var. biflorus Hackel. Las diferencias entre ambas variedades son las siguientes: var. berteronianus (Sch.) H. | var. biflorus HackeL. Spiculae binae, inter se inae- Spiculae binae, inter se aequa- qualis, superiorbrevior, interdum | les, lanceolatae, 3,5-4 mm. longae tabescens, inferior 2,5-3mm.lon- a 1/3 inferior attenuatase. ga, late lanceolata a medio brevi- | ter acutata. 20 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. La última variedad hasta la fecha sólo había sido conocida de Europa y no se puede admitir hava sido introducida de ahí, puesto que el lugar en donde la encontrábamos (junto con la primera va- riedad) fué en una altoplanicie árida, que dista más de cien kiló- metros de cualquier terreno cultivado. IV. TRISTEGINEAE. ARUNDINELLA RaDDI. 28. Arundinella hispida (Wiztp.) O. Kuntze. O. Kuntze, Rev. gen. pl. 1. p. 7161 (1891) 11? 341. (1898): Hassler, El. pilc. 1. 25. Syn: Andropogon hispidus Willd. spec. 1v, 2. p. 903 (1806). » Ischaemum hispidum H. B. K. nov. gen. 1. 194 (1815). » Goldbachia Mikani Trin. in Spr. neue Entd. 11. 31 (1821); » Arundinella brasiliensis Raddi, Agrost. bras. 31 (1823); Arech. Gram. urug. p. 186. n” 1; Hackel in Pl. hassl. 1. 364. St. n* 17,657 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). Grama ribereña de múltiples rizomas largas. Las cañas son sim- ples ó ramosas, alcanzando á una altura de uno á dos metros. Las hojas son lineares de un largo da 20-30 em. por 5-10 mm. de ancho. La panoja es amplia, densa, de forma oblonzo-lanceolada de 20-30 cm. de largo por 10-12 cm. de ancho. Planta poco adecuada para forraje. Su área geográfica es Entre Rios y ahora el Chaco (Uruguay y Brasil). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 21 V. PANICEAE. PASBALUM: L. 29. (32b) Paspalum acuminatum Rabnr. 30 (33 b) Paspalum conjugatum Bera. 31. Paspalum densum Porr. Poiret, Encyclop. v. 32. (non Trin.); Peckolt, Plant. ut. é med. Bras. (1891), p. 427; Hassler, Fl. pile. 1. 27. Syn: Paspalum vulnerans Salzmann ex Steud. Nomencl, 11. p. 213. Syn: Paspalum millegranum Schrad. ex Schult. Mant. 11. 175. N. v. Capii-quicé, Capim de Colonia (Bras.). var. eliptico-oblongum HackEL nov. var. Differt a typo spiculis elliptico-oblongis, nec ovato-orbicularibus. St. n* 16,870 (12. 1. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). La especie típica se caracteriza por sus cañas de */2-1 m. de al- tura, hojas vigorosas, estrechas de unos 25-35 cm. de largo; vainas apenas abiertas, sedosas, hacia el ápice; la inflorescencia es forma- da por una panoja de próximamente 15 cm. de largo, con las espi- guillas minutas, verde-claras, bastante aproximadas. Buen sustento como forraje para el ganado. Citamos por primera vez esta planta para la R.A., habiendo sido considerada como originaria del Brasil. 32. 23a, 34b) Paspalum dilatatum Pork. genuinumn. St. n* 17,451 (18. 1v. 1907) Catamarca (M. E.). St. n* 17,484 (15 11. 1907.) Estancia «Espinillo», Estación Coro- nel Vidal, cerca del Atlántico, F. C. S. Prov. BA. (M. E.). St. n* 17,766 ex Lillo n* 4,667 (15. 11. 1906) Prados, Tuc. 292 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n* 18,344 (20, x1r. 1907) cercanías de Córdoba. Nora: El Dr. Arechavaleta, en Gram. urug. p. 47, siguiéndolo también con cierta duda el Sr. M. Berro en sus gram. de Vera p. 60 n* 21 y p. 64 no 114, refieren de esta especie la variedad sac- chariferum Arech. indicando, que tiene la propiedad de segregar un jugo viscoso azucarado, que le ha valido el nombre de Pasto- miel. Esta forma no es variedad, sino un estado enfermizo, el que ha provocado cierta idiformidad y la propiedad glutinosa es de- bido á la infección de un hongo parásito, igual ó análogo, al que mencionamos en la Festuca Hieronymi H. (25 a, 35 b) forma paucispica HackeL. 33. 26 a, 31 b) Paspalum distichum L. yenuinum. Hassler, Fl. pilc. 1. 26. St. n* 17.475 (1. 111. 1907) La Barrancosa F.C. S. BA. (M. E.). » » 19,388 (10. xt1. 1908) Río IV, C. » > 20 ¿005 (al: Iv. 190 J9) (38 b) var. Digitaria Hacker. St, n* 16,866 (21 1. 1907) Rio IV, € » » 17,075 (3. 11. 1907) La Diana, Dep. San Martín, Rioja. LT 410 (10 11, 1907) Estancia Mo Quequén B-A. (M. E.). 17,530 (12. vi. 1907) Jardin atómico. B-A. (C. T.). » » 17,767 ex Lillo n* 5,118 (15. 11. 1907) lugares húmedos Mat Te: St. n* 18,842 ex Lillo n* 7,618 (12 11. 1903) rio Carreras, Tafi, Tucumán. St. n” 20,004 (1. 1v. 1909) Rio IV. C. Y Y 34. (39 b) Paspalum Hieronymi HackeL. 35. (34a, 40 b) Paspalum humboldtianum Fuurcar. var. Stueckertii HackeL. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 23 36. Paspalum inaequivalve Ranp1. Raddi, Agrost, bras. 28, (1823); Morong, Enum., pl. Parag. p. 258. Hassler, El. pilc. 1. 26. var. glabriflora HackeL nov. var. Differt a typo, spiculis omnino glabris. In typo glumae steriles, margine pilosae v. inferiore glabrae. St. n* 19,049 (15. vi. 1908). Colonia Margarita Belén, por Re- sistencia, Chaco austral (H. M.). Grama débil y graciosa, que con predilección se produce en te- rrenos húmedos y sombríos, costas de rios y arroyos, emitiendo de una sola raiz múltiples y erguidas cañas. Estas alcanzan á una altura de 15-25 cm. y forman á veces un conjunto de verdaderas matas. Panoja pauciflora espiciforme. Las espiguillas son escasas, cortas y algo distantes entre si y las valvas glumales desiguales. Regular forraje para el ganado. El área geográfica de la típica es Chaco, Corr., Form. (Parag. Bras.). 37. (27a) Paspalum Larrañagai ÁRECHAVALETA. Arechavaleta, Gram. urug. p. 45 (1896). (24a, 36 b) Syn: Paspalum dilatatum Poir. var. parviflorum Doell. Le. Syn: Paspalum vaseyanum L. Scribn. amer. grasses IL 32. (fig. 328) (1899). St. 4 más de los números anteriormente citados: St. n* 18,988 (vr. 1905) Chilecito, Rioja, (Nicanor Izaza). > >» 19036 (12. vu. 1908) Parque 3 de Febr., B-A. (C.“E.). 2 200 (Lv. 1909) Rio EV Cordoba. Habiendo confrontado mayor cantidad de material, hemos podi- do comprobar que las diferencias existentes entre la especie típica P. dilatatum Poir. y la llamada var. paviflorum Doell. son efectiva- mente suficientes, para elevar la que antes considerábamos como variedad, á especie propia, de modo que así lo hicimos. Por otra 94 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. parte, es el mérito del Dr. Hackel de haber podido constatar en esta ocasión con muestras efectivas á la mano, que la planta que Scribn. llamó P. vaseyanium, originario de Texas, no lleva dife- rencia alguna con el /?. Larañagai Arech. Por este hecho, viene á aumentarse el número ya cuantioso de las gramas de la parte oeste de los Estados Unidos, que vuelven á encontrarse sin intermedia- rio conocido, en el Sur del Brasil y en la Argentina. 38. Paspalum maiacophyllum Trix. genuinaum. Trin. Icon. Gram. Panic. 98. tab. 211; Doell. in Mart. «€ Eichl. Flor. bras. 11. 2. 298; Hackel, in Pl. hasslerian. 1. 364. St. n* 171,800 ex Lillo n” 6,240 (4. 1v. 1907) La Banda, Prov. Santiago del Estero. St. n” 18,853 ex Lillo n” 7,957 (17. 1. 1908) Rincón, TaHi, Tue. á 2,100 m. alt. St. n” 19,833 ex Lillo n* 1,927 (13. 1v. 1897) Vipos, Dep. Tran- cas, Prov. Tuc. St. n” 21601 (20. 111. 1910) Burruyacu, Tuc. (S. G.). Grama robusta de terreno algo húmedo, cuyas cañas bien dere- chas se elevan de á 1-2 m. de altura. Panoja un tanto contraida, raquis lampiña. Hojas de 1-1 */¿ cm. de ancho, un poco tiesas. Es abundante y proporciona buen forraje. Opinamos citar por primera vez la especie genuina para la R. A., siendo su origen más al Norte. (Parag. Bras.). var. linearifolium Hackes. Hackel in Fedde Repert. vr. 341 (1909) n” 3; Hassl. El. pilc. 1. 26; N. v. Capii-cabayú (Chaco). St. n* 18,616 (23. 11. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). La variedad difiere del tipo por sus hojas lineares de 20-30 cm. de largo, por 5 mm. de ancho y no linearo-lanceoladas. Fué citada de Form. (Parag.). (2Sa, 41b) var. longepiluam Hack. St. n* 11,114 (3. m1. 1907) La Diana. Dep. San Martín, Rioja. » » 18,520 (29, 1. 1903) Sierra Chica de Córdoba. QU STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 2 forma parviflora HackeL nov. forma. Inter var. longipilum et gen inum fere mediam, nam rhachis prosa est, sed spiculae parvae. St. n* 21,625 (10. 1v. 1910) Casa Bamba, Sierra Chica, Córdoba. 39. Paspalum multiflorum DorLz. Doell. in Mart. y Eichl. Flor. bras. Gram. 1. 2. p. 90; Arechava- leta, Gram. urug., p. 55. n” 15; Hackel, in Pl. hasslerian. 11. 365. forma? abbreviata HackeL nov. forma. Racemis quam in typo multo brevioribus. Parece más bien dejarse reducir á un ejemplar anormal y no ser una forma peculiar estable. La especie normal tiene sus espiguillas mucho más largas, pero en la forma, etc., concuerdan bien. St. n* 19,487 (18. xrr. 1905) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). Grama robusta, propia de bañados y terrenos bajos, en donde tiende á formar matas, floreciendo en Diciembre. Sus cañas ergul- das son envainadas y finamente estriadas, con nudos obscuros y alcanzan á una altura de 1-2 m. Ligula breve. Láminas rígidas y angostas, con márgenes ásperas y cortantes. Panoja lanceolada de 30-40 cm. de largo por 3-5 cm. de ancho. Espigas robustas de color ferrugineo-morado, en número de 30-50, asentadas, pero erectas, de 8-10 cm. de largo. Espiguillas también numerosas bien apretadas entre si y sostenidas por pedunenlillos cortos. Forraje mediocre. La citamos por vez primera como de la KR, A., siendo la especie tipica indicada como del Urug., Parag. y Brasil. 40. 2%9a, 42b) Paspalum notatum FLuEGGE. Hassler, Fl. pilc. 1. 28. St. n* 19,846 ex Lillo n* 6,604 (5. xr. 1903). Mocovi, Santa Fe. 26 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 41. Paspalum ovale Nerxs. Nees, apud Steud. Synops. Pl. glum. 1. 22 n* 86 (1855). Syn: Paspalus ovalis Nees ab Es in Herb. Reg. Berol. Schedul. Cañas erguidas, comprimidas, estriadas, lampiñas, de 45-60 cm. de altura, con nudos pardo-obscuros. Vainas foliares comprimi- das, estriadas lampiñas. Ligula transversal, membranácea breve- mente redondeada. Lámina linear, puntiaguda, lisa en su faz supe- rior y diferentemente estriada en la inferior. Inflorescencia de eje común, sub-anguloso, los ángulos inferiores lisos y los superiores un tanto ásperos. Espigas, 3-4, alternadas, más ó menos aproxi- madas, erguidas ó suberguidas, lineares, raquis deprimidamente triangular. Las espiguillas son angostas, empizarradas, erectas, lampiñas, aovado-elípticas, en su base subpilosas. Los pedicelos son alternados y llevan sólo una ó dos espiguillas. La especie es muy aliada al Pasp. notatum Fl., del cual tal vez no constituye sino una sub-especie ó forma exhuberante. var. apiculatum Hackez. Hackel in Fedde, 1. e. p. 341. n* 4; Hassler, Fl. pilc. 1. 26. Differt a typo glumis sterilibus apiculo minuto crassiusculo ter- minatis. St. n* 16,300 (26. xr. 1905) Colonia Benites, Chaco (N. KR, A.). Referente á este ejemplar, dice el Dr. Hackel: El P. ovale sólo lo conozco por la descripción en Nees l. c. y por Doell. in Mart. Fl. bras, pero ninguno de los dos autores menciona algo del «apiculus» ó sea de una especie de borlita minúscula, que se encuentra en la extremidad de la gluma estéril, ni apercibo tampoco indicado ahí, la propiedad de la nuestra, que presenta las hojas guarnecidas en el margen con pelos dispersos, asentados sobre nuditos, condición que hace distinguir nuestra variedad de muchas otras especies de Paspalum. La especie típica fué citada como del Brasil. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 27 42. (30a, 43b) Paspalum plicatulum MicHx. Hassler, Fl. pilc. 1. 26. St. n* 16,293, 302, 18,302, 05, 18 (1906-1907). Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). St. n* 16,677 (30. x11. 1906) La Falda, C. » » 17,466 (1. 111. 1907) La Barrancosa, B-A. (M. E.) » » 18,479 (28. 1. 1908) Resistencia, Chaco (N. R. A. » » 20,409 (15, x11. 1909) Villa Garcia, Tanti, C. )» (Bla, 44b) forma macra HackeL. 43. (32a, 45b) Paspalum quadrifarium Lan. Hassler, Fl. pilc. 1. 26. St. nv 17,470 (1, 111. 1907.) La Barrancosa, B-A. (M. E.). » » 19,847 ex Lillo n* 6,549 (6. v. 1904) Mocovi, Sf. (33 a, 46 b) var. elongatum (Gris) HackEL. var. minus DorLz. Doell. Fl. bras. 1. 2. p. 90, Espigas más cortas y sencillas, espiguillas más ó menos lineales y casi obtusas. St. n” 18,743 (16. 1v. 1908) Estancia Sta. Rita, Vela, B-A. (M. B.). » » 20,985 (20. xtr. 1909) Los Cocos, Punilla, C. Nueva variedad para la R, A, citada antes del Brasil. 44. (41 b) Paspalum scopariunY FLUEGGE. St. n* 18,321 (18. x11. 1907) Col. Benites, Chaco (N. R. A..). 45. Paspalum stellatum FrLueccrE. Fluegge, Monogr. p. 62 (1810) (non Trin.); Niederlein, Result. bot. Mis. p. 71; Peckolt, T., Plant. med. é ut. bras. p. 420 (1891.); Hackel, in Plant. hassl. 11. 366 (1908). 28 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Syn: Paspalum cujabense Trin. spec. gram. le. m1. t. 284. N. v. Capim estrella (Bras.). St. n* 17,665 (2. vir. 190) Colonia Benites, Chaco austral (N. R. A), determinado así por el Dr. Lillo y confirmada su deter- minación por el Dr. Hackel. Grama de terreno bajo y húmedo, cañas geniculadas y casl lisas, de 30-50 cm. de altura. Sus hojas de 15-25 cm. de largo son estre- chas y casi lisas. Su inflorescencia es terminal y fusiforme, apare- ciendo envuelta en una vaina foliar, por cuya razón pertenece á la subsección «Cerezia». Sus espiguillas pequeñas y uniseriales están cubiertas de pelos finos y cortos. Es un pasto poco social, de consistencia blanda, considerado sin embargo, nocivo para el ganado, ignorándos. cuál es la substancia contenida, que es la causante del perjuicio y los sintomas de into- xicación que provoca su ingestión. Fué citado de Mis. y Tuc. y recién ahora como del Chaco, en donde es bastante escaso; mientras que en varios Estados del Bra- sil es regularmente común. forma hirsuta HackeL nov. forma. Differt a typo folíis hirsutis. St. n*? 18,694 (31. 111. 1903) Resistencia, Chaco (H M.). A 6. (48b) Paspalum virgatum L. typicum Lin. sp. pl. ed. 11. 81 pp.; H. B. K. Nov. gen. d spec. am. 92; Gri- seb. Symb. n* 1,955; Hieron. Plant. diaph. p. 287; Arech. Gram. urug. 56 n* 16; Hassler, Fl. pilc. 1.27, St. n* 17,531 (12. vr. 1907) B-A. cult, (C. T.) obtenido por semi- llas provenientes del Chaco. St. n* 18,300 (18. x11. 1907) Colonia Benites, Chaco (N, R. A.). Ya hemos hablado de esta especie al exponer su forma «oligos- tachya» y debemos aqui rectificar un informe erróneo, cuyo infor- me era, que sus cañas solían ser usadas para techar; hoy sabemos, que son empleadas raras veces, por haberse experimentado, que constituyen un material inadecuado para este fin, habiendo sus cañas resultado quebradizas y de poca solidez. Proporciona forraje mediocre. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 29 Fué citado antes de E. T. y Form. y recién del Chaco (Parag. Bras.). (48 b) forma oligostachya HackeL (tal vez especie propia). Esta forma se encuentra á menudo invadida por hongos parási- tos glutinosos, análogos á los aparecidos sobre la /estuca Hiero- nymi. ANTHAENANTIA BEAUvV. 47. Anthaenantia lanata (Ners.) BentH. Benth. in Journ. Linn. Soc. xix (1832) p. 39; Niederlein, Re- sult. bot. Mis. p. 12; Grah. Kerr, Exped. Pilcomayo p. 11; Arech. Gram. urug. p. 14 n” 1; Hackel, Pl. hassl. 11. p. 361; Macloskie, Exp. patag. p. 163; Berro, M., Gram. de Vera. p. 69; Hassler, Fl. pile. 1. 27. Syn: Leptocoryphium lanatum Nees ab Es., Agrost. bras. p. 34; Mart. € Eichl. Fl. bras. 11. 2,120 tab, 17. Syn: Paspalum lanatum H. B. K. Nov. gen. € spec. 1. 94. t, 29. » Milium lanatum Roem.4 Sch., Mant. in Syst. veg. 11. 322. (non Gris.); Hieron. Pl. diaph. p. 287; Niederlein, Result. bot. Mis. p. 73. St. n* 17,606 (1. v. 1901) La Toma, alrededor de Catamarca (M. E.). » » 18,949 (23. vr. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). Grama esbelta de rizoma bulbiforme y escamoso, de consisten- cia algo leñoso, que florece desde Dic.-A bril. Se presenta en conglomeraciones ralos 6 aislada con preferen- cla en terrenos áridos, silicosos ó arcillosos, elevándose sus cañas de 40-S0 cm. de altura. Hojas angostas con punta aleznada. Pano- ja erecta compuesta, espiguillas lanceoladas, agudas y peduncula- das; las glumas aparecen abundantemente cubiertas de pelos blan- quecinos y las palletas son apergaminadas de color pardo un tanto transparentes. | Como forraje es de escaso valor nutritivo. Su área geográfica es fijada desde RN. BA. E Sf.C.Ct. T. Corr. Form. Mis. (Urug. Parag. Am. mer. y central). 30 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. ERIOCHLOA H. B. KrH. 48. (39a, 49b) Eriochloa montevidensis Gras. St. n” 17,959 (15. xr. 1907) La Diana, Dep. San Martín, Rioja. » » 19,488 (18, x11. 1908) Col. Benites, Chaco (N. R, A.). » » 20,121 (20. 1v. 1909) Cañada alegre, Burruyacu, Tuc. (S. G.). (36 a, 50b) forma subcolorata Hacker. St. n” 16,275 (26. xr. 1906) Colonia Benites, Chaco (N. R, A.). 49. Eriochloa punctata (Lix.) HamtcroN. W. Hamilton Prodr. Fl. Ind. occ. 5 (1825); Gris. Symb. n* 1959; Hieron. Pl. diaph p. 288, Morong. En. Pl. parag. p. 259; Hackel, in Pl. hassl. 11. 366 (1903.); Hassler, Fl. pilc, 1. 28. Syn: Milium punctatum Lin. Amoen. Acad. v. 392; (1159). » Eriochloa polystachya H. B. K. Nov. gen. « spec. Pl. 1. 95. (1815). Syn: Helopus punctatus Nees, Agrost. bras. 16; Mart. € Eichl. Flor. bras. 1. 2.125, St. n* 17,448 (18. 1v. 1907) cercanias de Catamarca (M. E.). » » 18,847 ex Lillo n” 7,893 (30. x11. 1907) Playas del Río Sali, Tuc. Grama de un aspecto verde alegre, cuyas cañas rectas se elevan á una altura de 50-50 cm. Hojas estrechas de 15-20 cm. de largo. La inflorescencia consiste en una panoja en forma de espiga estre- cha, con un número reducido de espiguillas lustroso-aleznadas. Su consistencia es jugosa y blanda y por consiguiente bastante apetecido por el ganado. Esta especie prefiere bajos húmedos y orillas de acequias ó rios, como sus congéneres. Fué citada de B-A. C. T. y Form. y recién la mencionamos de Cat., pero se produce en una gran parte de la zona cálida, en el Brasil, hasta en la América septentrional. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. ol PANICUM L. 50. Panicum adustum Ners. Nees ab Esenb., Agrost. bras. 101; Steudel, Synops. 43. N.o 85; Doell, in Mart. Flor. bras. vol. 11. pars. 11. p. 135; Arechavaleta, Gram. urug. p. 94 n” 4; Bettfreund Herb. 11. p. 34 n” 410; Nieder- lein, Result. bot. Mis. p. 12; Hassler, Fl. pilc. 1. 29; Syn: Digitaria adusta (Nees). Gris. Symb. n* 1,957; Hieron. Plant. diaph. p. 288; Syn: Syntherisma adusta (Nees) Agnes Chase, in Proced. of biolog. Soc. of Washingt. vol. xrx. 191 (1906). N. v. Pasto de araña (Chaco). St. n* 18,615 (28. 11. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). Planta cespitosa con rizomas multicaules. Cañas un tanto apre- tadas ascendentes, de 50-120 cm. de altura, con su base envuelta en una especie de escamas foliares, siendo sus nudos obscuros y subvellosos. Las vainas son estriadas, la ligula es corta y membra- nácea, las láminas son pálidas, rigidas, filiformes y tienen los bor- des algo enrollados, por lo que las láminas parecen ser punzantes. Panoja corta con 2-8 espigas de 8-20 cm. de largo. Espiguillas oblongas y agudas, ferrugineo - obscuras. Pasto duro y de poca uti- lidad como forraje. Fué citado de E. Ch. (por primera vez) Mis. (Urug. Parag. Bras.) 31. Panicum amplexicaule Ruz Rudge, Pl. Guian. 1. p. 21 t. 27 (1805); Trin. Spec. Gram. t. 205; Morong, Enum. plant. parag. p. 259; Hackel, en Pl. hassl. 11. 368; Arech. Gram. urug. 129 n” 30; Hassler, Fl. pilc. 1. 31; Syn: Hymenachne Myurus Beauv. Agrost. p. 48. t. x. f. 8 (non Panicum Myurus Lam.) N. v. Capii - camalote del agua (Chaco). St, no 17,674 (2. vir. 1907) Col. Benites, Chaco (N. KR. A.). » » 18,199 (28. 1v. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). Grama que habita con preferencia en lugares anegadizos en las márgenes de los rios. De los largos rizomas sumergidos en el barro se levantan sus cañas erectas, estriadas y lampiñas de uno y más metro de altura. Estas presentan nudos obscuros y entrenudos 32 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. cortos. Hojas grandes de 25-40 cm. de largo por 3-5 cm. de ancho, consistencia algo rigida con su margen escabrosa que abrazan por completo el tallo “amplexicaules). La inflorescencia representa una panoja espiciforme de 20-30 em. de largo en cilindros densisimos, guarnecidos de espiguillas lanceoladas de un color verde pálido. Las glumas de ellas son provistas de aristas ásperas. Planta muy social, apareciendo generalmente en gran número de individuos juntos y proporciona un buen alimento para el ga- nado. Fué citada antes de Formosa y ahora la citamos del Chaco, habiendo sido conocida ya como del Uruguay, del Brasil y de la Guyana. 32. (38a, 51b) Panicum Bergii ArecHAVvALETA. St. n? 16,678 (30. x11. 1906) La Falda, C. » » 17,389 (15, 1.1. 1907) Tornquist, B-A. (M. E.). » » 17,640 (6. 11. 19071) Nutrias, B-A. (M. E.). » » 17,7í0 ex Lillo Colec. Rodríguez n* 70 (1. xr. 1903) B-A. » » 18,293 (18. x1r. 1907) Marcos Juárez, C. » » 18,141 (16. 1v. 1903) Vela, B-A. (M. B.). » » 19,849 ex Lillo n* 8,038 (7. x1. 1903) B-A. » » 20,096 (5. 1v. 1909) Carnerillo, Río IV. C. Algunos ejemplares presentan coloración violácea. 93. (39a,52b) Panicum colonuam L. St. n? 17,660 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N.R. A.). (40 a, 53 b) forma maculata ArecHAVALETA. 34. (£l a,54b) Panicum erusgalli L. typicum. Hassler, Fl. pilc. 1. 29. St. no 11,627 (18. v. 1907) Copacabana, Cat. (M. E.). » » 18,156 (16. 1v. 1903) Chelco, Rioja (F. $S.). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 500 (42a,55b) var. brevisetum DorLL. St. n* 10,766 (12. x1r. 1901) Mina Clavero, C. « » 17,258 (18. 111. 1907) La Diana, S. Martín, Rioja. » » 17,493 (15. 11. 1907) Nutrias, F. C. S., B-A. (M. E.). » » 18,790 (16. 1v. 1908) Chelco, Rioja (F. S.). » » 20,005 (4-6. 1v. 1909) Rio IV, C. (43 a, 56b) var. sabulicola DorLz. Hassler, Fl. pilc. 1. 29. (44 a, 57 b) var. vulgare DorLz. St. n? 16,851 (19. 1. 1907) Río IV, C. » » 17,319 (9. 1v. 1907) Est. Río I, C. 55. Panicum cyanescens Nes. Nees ab Esenb., Agrost. brasil. (1829) 220; Trinius, Spec. Gram. xx. t. 236; Kunth., Enum. r. 110 n* 233; Doell, in Mart, Flor. bras. 11. 2. p. 261; Arech., Gram. urug. (1894) 136 n” 38; Lindman, Gra- mineenfl. Sidamerikas (1900) 14, 40, 45; Hackel, in Chod. «€ Hassl. Pl. hassl. 11. 370 (1903); Hackel, in Erg. bot. Exp. n. Súdbras. (1906) p. 12 n* TO. Syn: Panicum granuliferum H. B. K. Nov. gen. d spec. 1. 109. » » auricomum Nees, l. c. 221. ME Poseyendo esta especie un circulo de formas bastante extenso, no estamos seguros, si la forma presente fué ya descripta ó no y dejamos su erudición para otra ocasión. St. n* 20,406, 20,479, 21,102, (15 € 16, x11. 1909) en arena húme- da, Ó sobre una capa de tierra humifera de las rocas del arroyo de Mojarras, cerca de Villa García, inmediaciones de Tanti, Dep. San- ta María, Prov. Córdoba. Planta débil, de cañas delgadas de 20-50 cm. de alto, erectas ó ascendentes, casi siempre recostadas ó afirmadas en las rocas; sub- estriadas lampiñas. Vainas foliares estriadas, margen desnuda, subauriculadas; ligula breve membranácea, trunca; lámina apla- Ana. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 8.*, T. xIv. Marzo 3, 1911. 3 34 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. nada, erecta, aguda, con estrías aproximadas y con su margen algo áspera. Panoja erecta ó inclinada, multiflora; eje liso ó subáspero hacia el ápice, lampiño; ramas más ó menos solitarias, cilindriformes, capilares, onduladas, sub-compuestas, ramillas un tanto flexuosas. Espiguillas pequeñas, elípticas y lampiñas, pedunenlillos cilíndri- cos y cortos. Gramínea tierna y polimorfa, que prefiere tierra húmeda. Pro- porciona un excelente forraje, pero no se la encuentra en cantidad, Citamos esta especie por primera vez de la R. A., habiendo sido conocida ya como del Uruguay y Brasil. 56. (45a, 558b) Panicum debile Desr. var. aequiglume Hacker. St. n” 20,042-75. (3-4. 1v. 1909) Rio IV, - Mol. Gamez.-C. 57. Panicum decipiens Nes. Nees, in Trin. Diss. de Gram. pan. p. 227 (15826); Nees, Agrost. bras. 193 (1829); Doell, in Mart. € Eichl. Flor. bras. 11. 2. p. 231; Arech. Gram. urug. p. 130 no 31; Hackel, in Plant. hassl. 11. 368; St. n” 17,320 (9. 1v. 1907) Estancia San Teodoro, ped. Villa- monte, Dep. Rio I. Prov. Córdoba. St. n” 18,736 (16. 1v. 1908) ibidem. Grama débil de rizoma rastrero, con cañas delgadas ascendentes, que llegan á una altura de 30-50 cm., son comunmente simples, no- tándose sin embargo raras veces ramosas, ostentando sus nudos un color pálido ó pardo. La inflorescencia es una panoja de forma cilindrica, que se asemeja á una espiga floja. Es planta de terreno húmedo, apareciendo mezclada con otras gramas, y su consistencia es algo seca, pero proporciona al ganado un buen sustento; no pro- duciéndose, sin embargo, sino en cantidad muy limitada. Opinamos citar esta especie por primera vez de la R. A., habiendo sido conocida antes como del Uruguay y del Brasil. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 35 58. (59b) Panicum divaricatum L. Hassler, El. pile. 1. 31 N. v. Caña de cesto (Chaco). St. n* 15,964 (2. x. 1906) Col. Benites, Chaco (N. R. A.). » » 18505 (28. 1. 1905) Resistencia, Chaco (H. M.). » » 19,153 (20. vim. 1908) Col. Marg. Belén, Chaco (H. M.). Los frutos (no maduros) son blanquizcos, transparentes, aseme- jándose á bayas carnosas. De sus cañas sólidas y flexibles se ela- boran cestos y canastos, de ahí su nombre. Los autores A. S. Hitchcock € Agnes Chase (The North amer. species of Panicum, Contrib. U. S. Nat. Herb. vol. xv. Oct. 22, 1910) han instituido para esta planta un nuevo género, que ellos llaman Lasiacis, y laespecie L. divaricata (L.) Hitchcock € Chase. 58. Panicum elephantipes Nres. Nees, Agrost. bras. 165 (1829); Trin. Diss. n. 206; Bettfreund, Herb. 11. p. 44 n” 513; Arech. Gram. urug. p. 107; Peckolt, Pl. med. bras. 441 (1891); Hassl. Fl. pilc. 1. 29. N. v. Pasto de cesto, Camalote de cesto (Ch.), Capim de tartaruga (Bras.) Pasto embalsado (Ch). St. n* 17,678 y 680 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco austral (NE. A). St. n” 18,806 (28. 1v. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). » » 19,029, 034, 087, (12. vii. 1908) Parque 3 de Febr. B-A. (E7T.). Grama acuática, frecuente en las costas del rio Paraná, sobre todo en lugares de escasa corriente. Sus rizomas vigorosos y nudo- sos, á veces de un largo de varios metros, se extienden en la super- ficie del barro ó en la margen del agua. Estos rizomas sumergidos, recostados y entrelazados se encuentran en sus nudos cubiertos de numerosisimas raicecillas largas y vienen á formar á menudo intrincadas matas, las que de cuando en cuando las crecientes del rio desprenden y arrastran por partes en su corriente. En medio de ellos se erijen las cañas gruesas y huecas, ramifi- cándose pronto. La inflorescencia es formada por una panoja terminal y com- puesta. 36 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES Como planta forrajera no carece de cierta importancia, pero no pertenece á la primera categoría. Ya anteriormente fué citada de Palermo, B-A. y hoy la mencio- namos de igual punto, del Chaco y de Form.; pero es probable que se encuentre desde el Brasil y Paraguay por ambos lados del Río de la Plata y del Paraná ó sea desde B-A., Sta-Fé, E-R., Corr., Chaco y Form., como asimismo es indicada del Urug. y del Brasil. 69. (60b) Panicum enpeancurum Gris. 61. Panicum fascieculatum Swartz. Swartz, Prodr. 22. et Fl. Ind. occ. 1. 145; Arech. Gram. urug. p. 118. St. n* 19,850 ex Lillo n* 6,230 (27. 111. 1907) La Banda, Sgo. del Estero. Planta vigorosa con cañas acodadas y ascendentes de una altura de 25-50 cm. Vainas foliares estriadas, 4 veces con pelos tubercu- losos. Lámina lanceolada prolongada en punta. Panoja compuesta, subdesplegada, densa, multiflora, de 6-12 em., ramas con barbas en la base. Forma á veces matas extendidas y apretadas, pero más general- mente se presenta aislada. Constituye un buen forraje para las haciendas. Referida por primera vez de la R. A. (Sgo.), siendo conocida como del Uruguay y Brasil. (46a, 61 b) var. fuscum DorLz. Syn: Panicum fuscum Sw. l. c. 23. - St. n” 12,192 (6. 11 1902) Cañada Alegre, Burruyac. Tuc. (S. G.) >» >» 21,603 (20. EE, 1910) >» » » » >» » 62. Panicuin hirticaulum J. S. Prest. J. S. Presl. in C. B. Presl. Reliqu. haenkean. 1. 303 (1830); Lam- son-Scribner, Grasses in the Bernhardi Herbarium Report. of Miss. bot. Gard. vol. 10 p. 46 tab. 19. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 37 Syn?: Panicum cayennense Lam. Illustr. 1. 173, fide Ind. Kew. St. n* 17,069 (3. 111. 1907) en abundancia en la Estancia «La Dia- na», Dep. San Martin, vía Tello, F. C. Arg. del Norte, Prov. Rioja. Planta robusta, con cañas erguidas ó recostadas, ramosas, Com- primidas barbinudas de 40-60 cm. de altura, las que, lo mismo que las vainas y hojas alargadas, son tuberculoso-hirsutas. Panoja manifestadamente compuesta, amplia y desplegada, raquis áspera, flores pediceladas, solitarias, oblongas, agudas; glu- mas desiguales, puntiagudas, las inferiores aovadas, acuminadas, tres-quinque nerviadas, las superiores doble más largas, aovadas, siete-nerviadas, acuminadas. La consideramos aliada con el Pani- cum Bergi Arech., del que se distingue á primera vista por la ma- yor vellosidad de sus cañas y hojas. Proporciona forraje mediocre. La citamos por primera vez de la R. A., siendo conocida antes como de México, de Nicaragua y del Este de los Estados Unidos de Norte-América. 63. (47a, 62b) Panicum insulare (L.) Meyer. var. typicum Hassler, Fl. pilc. 1. 29. Syn: Valota insularis (L.) Agn. Chase in Proced. of biolog. Soc. of Washington vol. xrx. p. 188. (1905). St. n” 17,233 (17. 111. 1907) Cruz del Eje, C. » » 17,606 (1. v. 1907) La Toma, Catam. (M. E.). » » 20,015-72 (8. 1v. 1909) Rio IV, C. (48 a, 63 b) var. penicilligerum (Srrc.) HaAckEL. St. n* 17,613 (20. v. 1907) Chacarita, Alrededores de Cat. (M E..), (49 a, 64 b) var. sacchariflorum (Rabp1) HackEL. (5B0a, 65 b) var. tenerrimum (KtH.) HackeEL. St. no 17,109 € 202 (3. 11. 1907) «La Diana» Dep. San Martín, Rioja. 38 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n” 17,400 (15. 111. 1901) Tornquist, B-A. (M. E.). » » 17,769 ex Lillo n” 5,688 (9. 11. 1907) Tafí del Valle, Tuc. á 2.000 m. alt. St. n* 17,817 (rx. 1907) Capilla del Monte, C. » » 18,95 (18, x11. 1907) Márcos Juárez, C. En el Chaco se llama « Pusto cabezón» ciertas plantas de Pani- cum insulare C. W. Mey, las que por causa de haber sido picado sus inflorescencias por un insecto, han adquirido dimensiones monstruosas de diformidad, desarrollándose en ellas unas especies de agallas, tomando forma semi-globosa como cabezas, de 1-1 */, em. de largo por 1 em. y aún más de ancho ó de diámetro, en las que sus glumas se han dislocado y desfigurado completamente. Las plantas así anómales se producen casi siempre en un nú- mero crecido de ejemplares y en terrenos bajos y húmedos. Este fenómeno no sólo aparece en el Chaco, sino, según el Dr. M. Lillo, en muchos parajes de las provincias del Norte, principalmente en la de Tucumán. 64. Paniceum lanatum SwArTz. Swartz, Prodr. p. 24 (1787); Flor. Ind. occ. 1. 168 (1797); Hackel in Chodat € Hassl., Plant. hassl. 11. 369; Hassl. Fl. pilc. 1. 30. Syn: Panicum latifolium Doell, in Mart. € Eichl. Flor. bras. 1 2. 206. (non L.). N. v. Pasto de caña, Tacuará-ni. (Ch.). St. n* 20,278 (2. 1x. 1909) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). Planta robusta de caña maciza de 1 42 y más metros de alto, ramoso-geniculada, tiesa, un tanto pubescente, Ramos divaricados, hojosos, algo peludos, Hojas de consistencia blanda, aovado-lan- ceoladas, acuminadas, de 15-17 cm. de largo, estendidas, estriadas. Vainas foliares lanudisimas, adelante bien abiertas. Panojas ter- minales, compuestas, erguidas de 15 cm. de largo. Ramos abiertos, flexuosos, lampiños. Las espiguillas son pediceladas, aovadas, lam- piñas, las mayores más distantes. Los pedicelos son capilares. La gluma calicina tiene 2 valvas y 2 flores. La válvula exterior es la mitad menor, aovada, obtusa, vellosa en su apice; la ¿interior es mayor, aovada estriada, cóncava, suavemente aquillada con el apice velloso. Esta especie es inadecuada para forraje, pero sus cañas pueden ser utilizadas. Fué confundida á menudo con el Panicum divari- STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 39 catum L. y el Panicum latifolium L. la citamos por primera vez de la R. A., habiendo sido indicado como del Paraguay, Brasil y de las Antillas. 65. Panicum laxum Swartz. Swartz, Prodr. 23 et in Fl. Ind. occ. 1. 157; Doell, in Mart. Fl. bras. 11. 2, 212; Gris. Symb. n” 1,967; Hieron, Fl. diaph. p. 289; Niederlein, Result. bot. Mis. p. 12; Morong. Enum. pl. parag. p. 261; Arech. Gram. urug. p. 124 n* 26; Hackel, in Pl. hassl. 11. 368; Hassl. Fl. pilc. 1, 30. Syn: Panicum agrostidiforme Lam. Ill. 11. p. 172 (1791). » » tenuiculum Mey, Prim. Essequ. p. 58 (1818). St. n* 19,851 ex Lillo n* 6,725 (5. 1x. 1904) Ocampo, Santa Fé. Grama delicada, de cañas débiles de */¿-1 m. de altura, de terreno húmedo y sombrío, que florece tardio ó sea de Marzo-Abril. Sus hojas son enagostadas y su panoja de unos 15-20 cm. de largo, se presenta suelta y abierta. Las espiquillas cortas, de apenas un cm. de largo, están asentadas unilateralmente á lo largo de la raquis y demnestran glumas blanquecinas. Suministra un excelente forraje. La especie fué indicada de E-R., Formosa y Misiones y ahora la citamos de Santa-Fé (Urug. Parag.; Am. templ. y tropical). forma minor HackeL nov. forma. St. n* 17,798 ex Lillo n* 6,228 (17. 1v. 1907) La Banda, Santiago del Estero. 66. (65b) Panicum Lilloi Hacker. St. n* 17,721 ex Lillo n* 1,411 (26. x11. 1888) Dep. de Tafí, Cuesta San Javier, Prov. Tuc. á 1,000 m. altitud. 67. (31a, 67 b) Panicum milioides Nees. Hassler, Fl, pilc. r. 31. N. v. Pasto de laguna (Ch.). St. ne 16,898 (29. 1. 1907) Las Rosas, La Falda, C. A0 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n” 18,298 y 338 (18. x11. 1907) Col. Benites, Chaco (N. R. A.). » » 19,142 (30, vir. 1908) Co]. M. Belén, Chaco (H. M.). » » 19,199 (1. x. 1908) ex Venturi (23. 1v. 1902) Barracas, B-A, (CA ELO. St. n* 19,332 (30. xr. 1908) Col. M. Belén, Chaco (H. M.). » » 19,483 (18. x1r. 1908) Col. Benites, Chaco (N. R. A.). » » 19,852 ex Lillo n* 6,422 (10. v. 1902) B-A. 21,101 (16. xrr. 1909) Villa Garcia, Tanti, C. y y forma intermedia HackeL nov. forma. ad. P. decipientem Nees, vergens. St. n* 16,812 (4. 1. 1907) Cap. del Monte, Punilla, C. (M. E.). 68. (Bla, 65b) Panicum monostachyum H. B. K. St. n* 17,768 ex Lillo n* 4,544 (18, 11. 1906) Tapia, Dep. Trancas, Tucumán. St. n* 17,799 ex Lillo n* 6,229 (6. 1v. 1907) La Banda, Santiago del Estero, 69. Panicum najadum HackeEL et ÁRECHAVALETA. Arech. Gram. urug. p. 103 n* 11. Lám. vu d vin. St. n” 19,851 ex Lillo n* 6,311 (10. v. 1902) Lagunas de B-A. Planta acuática un tanto débil, viviendo entre «camalotes», fijándose por las raicecillas de sus rizomas sumergidos. Cañas estoloniferas y ramificadas, á veces flotantes, provistas de nudos lampiños radicantes. Ramas erectas de 30-40 cm. de alto, termi- nando en una panoja estriada y lampiña. Vainas foliares abiertas, ligula breve pestañosa; lámina plana, lanceolada, puntiaguda. El eje común de la inflorescencia es angular y las ramificaciones son en forma de espiga, opuestas ó subverticiladas. Las espiguillas son largas de forma oblongo-lanceolada, de color rojizo, alternas, superpuestas y aristadas, sostenidas por pedúnculos cortos angulosos. El aspecto de la planta se asemeja algo á las especies de Oplismenus Beauv. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 41 Suministra buen forraje y la citamos por primera vez de la R. A., siendo conocido del Uruguay. 70. (69b) Panicum ovuliferum Prix. 71. Panicum paucispicatum Morona. Morong, in N. Y. Acad. scienc. vr. (1893) p. 262; N. v. Niña-caapii (guarani) Paraguay. Hackel, ex Coll, Schickendantz n* 215 - Pilciao, Catamarca. Setas dr SOliex Lillo n? 6,231 (17. 11. 1907) La Banda, Prov. Stgo. Estero. Planta robusta de terreno húmedo de cañas geniculadas, es- triadas, pubescentes, de 30-60 cm. de altura. Hojas de 4-7 cm. de largo por 9-18 mm. de ancho. Inflorescencia en panoja espiciforme laxa, de 2-4 cm. de largo, produciéndose algo distante una de la otra. Florece Marzo-Mayo. Su consistencia es jugosa y blanda, constituyendo un buen forraje para las haciendas. En su descripción Morong la indica como habitante del gran Chaco paraguayo y hoy la citamos por primera vez de Catamarca y de Santiago del Estero. 72. (10b) Panicum platyphvllum Muxro 73. Panicum Prionitis Neres Nees ab Es., Agrost. bras. 162 (1829); Trin. Act. Petrop. (1835) pp. 292; Steud. Syn. 84 n* 631; Doell. in Mart. € Eichl. Fl. bras. 11- 2. p. 242; Arech. gram. urug. p. 131 n* 33; OK. Rev. n1?, 363; Syn: Coleataenia gynerioides Gris. Symb. n* 1,982, conf. Lor. Veg. del Nordeste de Entre Ríos p. 91 n*548 et p. 153, no 1,290; Hieron. Pl. diaph. p. 290; E. Matoso, Cien ind. p. 1 93, n* 287; Hassler, Fl. pilc. 1 73. N. v. Cortadera, Paja brava, Capy1-quiycé (Corr.). St. n* 14,199a (28. x1r. 1904) en barro de agua salobre del Arroyo de Tortugas, Límite de Córdoba y Sta-Fé (Ejemplar. estériles). A9 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n* 18,947 (23. vr. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). » » 18,319 (18. x11. 1907) Col. Benites, Chaco (N. R. A..). » » 18,805 (28. 1v. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). Grama vigorosa que forma densas matas de 1-2 m. de diámetro, frecuentemente sobre prominencias bajas del suelo en lugares anegados, orillas de arroyos y ríos de lenta corriente, reunidas en matorrales espesos, cubriendo á veces trechos de varios kilómetros cuadrados, constituyendo asi un elemento principal, hasta en ciertos puntos, exclusivo, de los pajonales de los bañados, pene- trando sus 10bustos rizomas profundamente en el barro húmedo. - Sus cañas son macisas (en contraposición de las de los P. grumo- sum Nees. y P. rivulare Trin., que son huecos), y alcanzan á una altura de 11/,-2 m. Sus hojas son larguísimas S0-100 em. por sólo 6 10 mm. de ancho, muy filosas en los bordes, pareciéndose á cin- tas. Su panoja es ampliamente desplegada, de 30-40 cm. de largo y sus espiguillas muy pequeñas ó sea de 2 mm. de largo por 1 mm. de ancho. La paja de esta planta es resistente y generalmente empleada como material para techar ranchos y formar quinchas en varias construcciones rústicas. Como forrajera es de poco valor, pues las hojas son un tanto secas y cortantes; en cambio puede suministrar en cantidad indeterminada y por un infimo precio 4 algún in- dustrial especulativo un material valiosísimo para fabricar papel, Su área geográfica es E-R. C. Sf. Corr. Chaco, Form. (Urug. Parag., Brasil). 74. Panicum proliferum Lam. Lam. Eneyel. 1v. 747 (1797) n* 79; Arech. Gram. urug. 115 n* 18; Morong, Enum. pl. parag. 262; Hassler, Fl. pilc. 1. 29, Syn: Agrostis panicoides Lam. I1l. 162 n* 828. » Panicum miliaceum Walter, Fl. car. 72. » » dichotomum Michx., Flor. am. bor. 1. 45. N. v. Pasto del bicho. St. ne 17,472 (1. 111. 1907) La Barrancosa, F. C. S., B-A. (M. E.). » » 17,661 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 19,052 (15. vr. 1908) Col. Marg. Belén, Chaco (H. M.). Grama robusta, estolonífera, de rizomas multicaules. Cañas erectas simples 6 ramificadas de 30-40 cm. de aitura. Hojas rela- tivamente cortas y anchas. Panoja erecta, pero de tamaño redu- STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 43 cido. Ella se destaca de lejos de las demás plantas al rededor por su color verde-claro, el que á veces se torna en morado. Prefiere terreno de mucho abono y de bastante humedad, flore- - ciendo desde Octubre á Marzo, es decir, todo el verano. Esta especie se asemeja al P. Bergi Arech. y su valor nutritivo lo iguala. Fué indicada por Anderson de Buenos-Aires costa de mar, y ahora la citamos también del Chaco (Uruguay, Parag. y Brasil). 75. Panicum rivulare Try. Trin. Diss. de Gram. pan. p. 213 (1826); Spec. Gram. t. 264. (1836); Doell, in Mart. Fl. bras. 11. 2. p. 208; Gris. Symb. n” 1,965 (1879); Hieron. Pl. diaph. p. 289; Grah. Kerr. Pilcom. p. (1; Morong., En. Pl. Parag. p. 262; Arechavaleta, Gram. urug. p. 120 n” 22; Hassler, Biépile; 1-30: Syn: Panicum excelsum Nees, Agrost. bras. p. 180 (1829). N. v. Capii-guazú (Paraguay). St. n* 19,854 ex Lillo n* 6,298 (20 x. 1903) B-A. Especie que emite cañas gruesas y lisas de 1-2 m. de altura. Vainas foliares estriadas lampiñas. Ligula breve. Hojas de 60-100 y aún más cm. de largo, de margen áspera muy filosa, las que se aguzan en una punta extremadamente larga. Panoja desparramada, multiflora, de 30-60 cm. de largo por 15-20 de ancho. Espiguillas pequeñas y estrechas, sostenidas por pedúnculos cortos. Pasto jugoso y blando, propio de terreno anegadizo y que proporciona buen forraje al ganado. Su área geográfica es B-A. (por primera vez) E-R. Corr. Form. (Urug. Bras.) var. grumosum (Ners). HackEL Hackel in Fedde Rep. 1v (1908) p. 343 n” 11. Syn: Panicum grumosum Nees, Agrost. bras. 182 (1829); Trin. Spec. Gram. t. 207; Doell, in Mart. Flor. bras. m. 2. p. 208; Gris. Symb. n* 1,966; Hieron. Pl. diaph. p. 289; Niederlein, Result. bot. p. 12; Arechavaleta, Gram. urug. p. 121 n* 23; Hackel, in Pl. hassle- rian. 11. 368, N. v. Paja mansa, Carrizo. (Ch.). St. n” 17,668 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). 44 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Variedad de la anterior, que también se produce en terrenos pa- ludosos, cañas de 1-2 m. de altura; hojas poco perceptiblemente estriadas, de 20-30 cm. de largo por 1-2 cm. de ancho. Panoja er- guida compuesta. Forma muy social, que á veces cubre largos trechos. Constituye un excelente forraje para las haciendas y sus semillas también la proporcionan un alimento confortable. Ha sido citada de B-A., E-R., Corr. y Mis. y recién la referimos del Chaco, siendo conocida como del Urug., Parag. y Brasil. 76. Panicum sanguinale L. (53 a, 12b) vár. ciliare (Rerz) Vasey (54 a, 13b) var. digitatum HackeL St. n* 18,808 (28. 1v. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.) » » 19,856 ex Lillo n* 6,399 (25. 1v. 1902) B-A. » » -20,017-21 (3. rv. 1909) Rio IV, C. (52 a, 11b) var. vulgare DorELL, typicum St. n* 17,459 (1. 11 1907) La Barrancosa, F. C. S. Prov. B-A, (M. E.) St. n” 20,018-19 (8. 1v. 1908) Rio IV, C. » » 211431 (18. 1. 1910) Estancia S. Teodoro, Rio 1, C. 77. Panicum spectabile Nexs. typicum Hass]. Fl. pilc. 1. 29. St. n” 19,030 32 (12. vxr. 1908) Parque 3 de Febr, B-A. (0, T;) Planta acuática, forraje de primera. Area geográfica: B-A. (por primera vez) Form. (Parag. Bras.) y muy probablemente en ambos márgenes del Río Paraná. (56 a, 15b) var. helodes HackeL St. n* 19,855 ex Lillo n* 6,419 (2. 111. 1902) B-A. Por primera vez de esta localidad. . STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. A5 78. Panicum trichoides SwaArtz. Swartz, Prodr. p. 24 (1785); . Morong, Enum. Pl. parag. p. 263 (1892); T. Peckolt, Pl. ut. € med. del Brasil p. 455 (1891); Doell, in Mari. El. bras. 11. 11. p. 249; Fries, R. E:, Ark. £. Bot. Bd. 8 n* 3; in Kenntniss der Phanerogamenfl. der Grenzgebiete zwischen Argen- tinien € Bolivien. 11. Einige Choripet. Monokotyl. Fam. p.35(1908); Hassler, Fl. pilc. 1. 31. Syn: Panicum multinerve Desv. in Poir. Encyel. Suppl. 1v. 279 (1816). Syn: Panicum commelinaefolium Kth... » » trichanthum Necs, Agrost. bras. p. 210 (1829). N. v. Capim andacá (Bras.). St. n” 19,906 ex Lillo n* 5,086 (17. vir. 1906) Ledesma, Jujuy. Esta grama ocupa en las regiones cálidas grandes extensiones de campo. Sus cañas se presentan geniculadas en la parte infe- rior, rollizas, lisas, á veces arraigadas en los nudos, alcanzando de 50 cm.-1 m. de altura, Sus hojas son lanceoladas de un color verde- claro, algo velludas de 5-10 cm. de largo, por 10-12 mm. de ancho. La inflorescencia es una panoja amplia y extendida, de 20-22 cm. de largo y sus espiguillas ostentan un color rojizo-violáceo. Florece en Diciembre y Enero. El cocimiento de las raices de esta especie se usa como emo- liente y diurético, en la proporción del seis por ciento. Es planta bastante jugosa, propia de terrenos humiferos; cons- tituyendo un buen pasto de forraje para las haciendas, pero no soporta grandes secas. Su área geográfica es Jujuy, Formosa (Parag. Bras.). 79. (16b) Panicum uncinatum Ranpor. $0. (1b) Panicum urvilleanam KtH. typicum Sa o 592 (19. -t. 1907) Rio" Ty, *C. A 11390 (10, 1v. 1907) Chelforó, B-A. (M. 17,421 (6. 11. 1907) Quequén, B-A. (M. 19452 (10. x11. 1903) Rig IV, C. Su distribución geográfica es: Pat. RN. BA. M. Sl, C. R. Ct. Juj. (Chile, California, Arizona). E... E... Y Y Y Y A6 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. (18 b) forma panicula expansa ST. 81. (57a, 19b) Panicum velutinosum Nezzs. forma typicum viride Sr. St. n* 17,123 (12, 111. 1907) ) » » 18,643 (1. 111 1908) | » » 18,159 (16, 1v. 1908) Chelco, Rioja (F. $.). » » 21,458 (26. 1. 1910) Estancia S. Teodoro, Rio I, C. La Diana, San Martin, Rioja (F. $.). (5Sa, SOb) forma violascens St. Panicum Sp. VEROSIMILITER NOVA? aff. P. nodifloro Lam. (incompleto). St. n” 19,056 (15 v1. 1908) M. Belén, Chaco (H. M.). Panicum sp. St. n” 18,320 (18. x11. 1907) Col. Benites, Chaco (N. R. A.)., (in- suficientemente desarrollado). ICHNANTHUS Brauv. 82. (81 b) Ichnanthbus pallens Munro. OPLISMENUS BEaAuv. 83. (82 b) Oplismenus compositus (L.) P. Beauv. var loliaceus (Lam.) HackeL St. n.o 17,677 (2. vin. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. AY SETARIA P. BEAUV. 84. (83 b) Setaria Caudata Rorm € ScHuLr. et forma ramosa HaAckEL NOV. FORMA culmo inferne ramoso. St. n.? 19,441 (S x11. 1908) Villa Maria, Dep. Río III. Prov.Córdoba. 85. (84 b) Setaria commutata (ScriBw.) HaCkEL Suse 19.456 (10 11. 1908) Rio. IV, 6. 86. Setaria flava Kunru. Kunth, Revis. 1. 46. (1829) (non Fourn.) Syn: Panicum flavum Nees, Agrost. bras. 239; » » » (Sect. Setaria) Doell, Mart. Flor. bras. 11 pt. 2. 159; St. n.” 19,203 (10, x. 1908) Embocadura del río Pilcomayo, For- mosa (C. M. H.) Ejemplar algo defectuoso. Grama de porte gracioso, con cañas erectas de más 6 menos 30 em. de altura, con nudos pardo-obscuros, lampiños. La lígula de las hojas ostenta un color amarillento-claro y sus pestañas son blanquizcas. Ella es parecida á la especie siguiente, de la cual se distingue principalmente por sus espiguillas más pequeñas. For- raje bueno. La citamos por primera vez de la R.-A., siendo indicado como del Parag., Bras., Am. meridional hasta de México. 87. (85 b) Setaria glauca (L.) P. Bravuv. Hassler, Fl. pilc. 1. 32;—Form. 48 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 7 88. (60 a, 93 b) Setaria gracilis H. B. K. typica Hassler, Fl. pilc. 1. 32; Syn: Setaria imberbis R. € S. var. gracilis (H. B. K.) Hackel. St. n.” 17,962 (27. x1. 1907) Estancia S. Teodoro, Rio 1, GC. » » 19,994 (31. 11. 1909) Dalmacio Velez, F. C. and., C. forma breviglumis HackeL nov. forma. Differt a typo gluma II. quam IV. duplo breviore. St. n.” 17,614 (20. v. 1907) Chacarita, Alrededores de Cat, (M. E.). (61a, 88 b) forma breviseta Hacker. Syn: Setaria imberbis R. € S. genuina. St. no 17,462 (1. 111. 1907) La Barrancosa F. C. S. B-A, (M. E.). » » 20,537 (16. x11. 1909) Villa Garcia, Tanti, C. » » 21,628 (1. 1v. 1910) Vela, F. € S, B-A. (M. B.) (S9 b) forma brevispica Hacker. Syn: Setaria imberbis R. € 5. f. brevispica Hackel. (62 a, 90b) forma flaviseta HackeL. Syn: Setaria imberbis R. €'S. f. flaviseta Hackel. St. no 171,962 a (27. xr. 1907) Estancia S. Teodoro, Río 1, GC. » » 20,022 (3. 1v. 1909) Rio IV, C. » » 21,606 (20. 11. 1910) Burruyacu, Tuc. (S. G-.). forma longiseta Hacker. (92 b) Syn: Setaria imberbis R. € $. f. longiseta Hackel. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. A9 forma megalantha SruckerT. nov. forma. Differt a typo floribus majoribus. St. n* 18,740 (16. 1v. 1908) Sta. Rita, Vela, B-A. (M. B.). forma radicans Hackez. (91 b) Syn: Setaria imberbis R. € S. f. radicans Hackel. var. purpurascens (H. B. K.) HackenL. (94 b) Syn: Setaria imberbis R. €$. var. purpurascens (H. B. K.). Hackel. St. n* 17,772 ex Lillo n* 5,691 (12, v. 1907) Tafí del valle, Tuc., á 2,250 m. altitud. 89. (S7b) Setaria Hassleri Hacker. var aequalis Hacker, 90. (63a, 95b) Setaria leiantha Hacker. (96 b) et forma subhirsuta Hacker. DI. (64a, 97 b) Setaria macrostachya H. B. K. Hassler, Flor. pilc. 1. 32, St. n* 20,109 (20. 1v. 1909) Estancia Segovia, Dep. Río I, C. 92. Setaria Onurus (WiLLD.) Grisep. Griseb, Fl, Brit. West. Ind. Isl. 555 (1864). Syn: Panicum Onurus Willd, apud Trin. in Mem. Acad. Petersb. Ser. 6, 111. p. 226 (1834). Axa. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. x1v. Marzo 7, 1911. 4 50 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Syn: Panicum setosum Sw. var, $. Nees, Agrost. bras. p. 251 ex p. et Trin. lc, gram. t. 96. fig. B. Syn: Panicum globuliferum Steud. Syn. 1. 51. (1855). (59 a, 86 b) Syn: Setaria globulifera (Steud.) Gris. Symb. n* 1975 (1879); Hassler, El. pilc, 1. 32. Syn: Chaetochloa onurus Scribn. € Merill. in Bull. n* 21, U. $. Dep. of. agricult, 111. (1900) p. 27 n* 17. St. n* 18,822 y 24 ex Lillo n” 6,234 y 38 (27. 1v. 1907), Santiago del Estero. St. n* 16,855 (21. 1. 1907) Rio 1V, Córdoba. » » 17,615 (1. vir. 1997) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.) » » 19,144 (30. vn. 1908) Marg. Belén, Chaco (H. M.) » » 19,99%a (31, 111, 1909) Dalmacio Vélez, Tercero abajo, C. forma grandiflora HackeL nov. forma. Differt a typo spiculis 3 mm. (nec. 2 mm.) longis. St. n* 17,082 (3, 111. 1907) La Diana, Dep. San Martin, Rioja. forma ramulosa HackeL. nov. forma. Differt a typo ramulis haud glomeriformibus, sed inferioribus spiciformibus ad 2 cm. longis. St. n” 18,804 (28. 1v. 1908) Resistencia, Chaco, (H. M.). Se presenta aqui el hecho curioso, de que una sola especie fué descrita por dos autores, bajo diferentes nombres especificos de Panicum. (P. onurus W. 1834, y P. globuliferum Steud. 1855) y que el mismo autor Grisebach traspasó en 1864 primero la una (P. onurus W.) al g. Setaria, llamándola S. Onurus (W.) Gris., y luego en 1870, en vista de ejemplares argentinos, en las que ya no reco- noció su propia planta anterior, traspasó la otra (P. globuliferum Steud.) también al g. Setaria, llamándola $. globulifera (Steud.) Gris. Resulta de ahi, que por la demostración de pertenencia de £. Onurus y S. globulifera á una sola especie, viene 4 eusancharse con- siderablemente el conocimiento de su dispersión geográfica, es decir, que ella abarca desde Patagonia, por B-A., Sgo., Tuc., hasta STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 51 Chaco y Form., y fuera del pais, el Uruguay, Brasil, una gran parte de Sud-América, hasta México y las Antillas. 93. (65a, 98b) Setaria penicillata Presz. St. n* 17,406 (15. 11, 1907) Estación Tornquist, F. C. S. Prov. B-A. (M. E.). St. n* 20,076 (4. 1v. 1909) en terreno paludoso, Rio IV, Molino Gamez, C. 94. Setaria platycaulis «SruckerT» HACKEL nov. spec. Stuckert, Herb. arg. n* 17,201 (12. 111. 1907) Estancia La Diana, Dep. S. Martin, Prov. Rioja, vía Tello, F. C. Arg. del Norte. Syn: Panicum platycaule («Hackel et Stuckert.») A. Kneucker, in Bemerk. zu den Gramineae exsiccatae xxv. Lieferung p. 4 n* 737 (1909). Annua. Culmi erecti, circ. ¿5 cm. alti, valde compressi, glaberri- mi circ. d-nodes simplices. Folía glaberrima, glauco-viridia. Vaginae laxae, compressae, internodia plerumque superantes. Ligula breviter membranacea, longius ciliata. Laminae e basi subangustata lineares, acutae, planae, ad 25 cm. long., 6 mm. lat., tenuinerves, Panicula spiciformis linearis, aequalis ad, 15 cm. long., viz 1 cm. lat., basi interrupta rhachi glaberrima, ramis appressis brevibus circ. 1 em. longis binis, altero basi nudo circ. 5-spicu- lato; altero a basi ¿-spiculato, axilus pedicellisque (brevissi- mis) scaberulis, spiculis dense imbricatis, singulis seta singula spicula 3-4-plo. longiori deorsum scabra fultis. Spiculae ovoideae circ. 3,5 mm. long., 2 mm. lat., altero latere valde convexae, viridulae, glaberrimae. Gluma 1. spicula medium aequans v. subaequans, late ovata, obtusiuscula, 5-nervis. 1 Ha sido impropio del Sr. Kneucker en aplicar, sin nuestro consentimiento, este nombre á la presente planta, pues no la determinamos así. Existe, por otra parte, ya un Panicum platycaulon OK. Rev. 1112 363 (ex Paspalum platycaulon Spr. = Paspalum compressum Nees. = Milium compressum Sw. (non Panicum compressum Biv.) 52 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. IT. spiculam subaequans v. aequans, orbiculari-ovata, obtusius- cula, mucronulata, T-nervis. TIT. spiculam aequans, late-ovata acutiuscula, dorso leviter de- pressa, T-nervis, vacua. IV. spiculam aequans, late mucronulata, dorso obtuse-carinata, obsolete rugulosa, albida. Palea glumam aequans, elevato-bicarinata, laevis. Antherae 0,8 mm. longae. Affinis S. leiantha Hack. quae differt radice perenni, culmo superne teretiusculo, inferne subcompresso, lamina basi rotun- data margine scaberrima, paniculae rhachi villosula, ramis multispiculatis, spiculis parvis (vix 2 mm. longis), glumis paucinerviis, gluma Il. spicula 1/4 breviore. Setaria setosa R. de Sch. differt a nostra, culmo tereti, panicula sursum attenuata, rhachi villosula, gluma IL. spicula 1/3 bre- viore, gluma IV manifeste rugulosa. Especie que se distingue por de pronto, porsus cañas achatadas (sobre todo ex sus partes inferiores). 93. (66 a, 99b) Setaria setosa P. BEAUv. typica. Hassler, El. pilc. 1. 32. Lillo y St. de muchisimos números, procedentes de C., Cat., Sgo., Tuc. y Salta. (100 b, forma ad S. leiantham vergens. (101 b) forma microstachya HackeL., (67 a, 102b) var. interrupta STUCKERT. 96. (103b) Setaria verticillata (L.) P. Beauv. St, n” 17,366 (6. 1v. 1907) Lezama, F. C. S., Prov. B-A. (M, E.). » » 20,008 (1. 1v. 1908) Rio IV, C. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 53 97. Setaria viridis (Liw.) P. Breauv. P. Beauv. Agrost. 178 (1812); C. Bettfreund, Herb. 35. n* 411; Syn: Panicum viride Lin. sp. Pl. ed. 2.83. (1762). » Chamaeraphis viridis Porter, Bul. Torr. Bot. Club. xx.196 (1893). Syn: Ixophorus viridis Nash, Bul. Torr. Bot. Club. xx11. 423 (1895) fig. 8. Syn: Chaetochloa viridis (L.) Scribn. U.S. Dep. Agr. Div. Agrost, Bul. 4. 39. (1897); Speg. El. Tandil p. 52 n” 309; St. n” 17,499 (15. 11. 1907) Sud de la prov. B.-A. (M. E.). Grama erecta, lisa, anual, de 20-80 cm. de altura, con hojas cor- tas, lanceoladas; espigas cilíndricas densas, verdes, ininterrumpi- das de 2-10 cm. de largo con numerosas aristas. Cañas muy rami- ficadas desde la base. Se produce con preferencia en terreno cultivado. Para la R. A, sólo ha sido citada de la Prov. B.-A., siendo probablemente intro- ducida de la América boreal ó de Europa, en donde es muy común. Forraje bueno. CENCHRUS L. 98. Cenchrus echinatus Lix. Lin. Sp. Plant. 1. ed, 11. 1150; Arech. Gram. urug. 155 n* 1, OK, Rev. 111? 346; Berro, M. B., Gram. de Vera p. 69 n* 37; Syn: Cenchrus pungens H. B. K. Nov. gen. et spec. 1. 115; N. v. Roseta, Capii - hati (guarani), Flechilla, St. n” 17,130 ex Lillo n* 2,510 (25. 1v. 1900) en campos incul- tos de las cercanias de Tucumán. Planta anual de terrenos arenosos. Florece de Dic. á Marzo y es como su congénere el (. tribuloides en ciertos lugares muy fre- cuente. X Presenta pajas ramosas de 20-50 cm. que generalmente son recostadas y ascendentes. Hojas cortas, ásperas y lampiñas. Inflo- rescencia axilar, formando un conjunto de muchos involucros espi- nosos. Al madurar los frutos se aguzan sus puntos espinosos y vienen á formar verdaderas púas punzantes. Constituyen así una calamidad para el ganado, principalmente para el menor, que no lo puede pastear. 54 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Su área geográfica en la R. A. es B.-A., E.-R., Sf., C., T., (Urug., Parag., Brasil y gran parte del continente Sur y Norte - americano). 99. (6Sa, 101b) Cenchrus myosuroides H. B. K. St. n” 17,611 (1. v. 1907) La. Toma, Cat. (M. E.). » » 17,682 (2. vir. 1907) Col. Benites, Chaco (N. R. A.). » » 18,823 ex Lillo n* 6,235 (5. 1v. 1907) Santiago del Estero. » » 18,984 (rv. 1903) Chilecito, Rioja (Izaza). » » 21,600 (20. 1rr. 1910) Burruyacu, Tuc. (5. G..). 100. (69 a, 105 b) Cenchrus tribuloides L. St. n? 17,773 ex Lillo n* 5,366 (12. xt. 1906) Las Cuchillas; Burruyacu, Tuc. St. n* 20,097 (5. 1v. 1909) Carnerillo, Dep. Río IV, C., muy fre- cuente. (106 b) var. macrocephalus Dorz. PENNISETUM L.C. RicH. 101. (107 b) Pennisetum chilense (Desv.) Jacks. 102. Pennisetum latifolium SerenG. Spreng. Syst. 1. 302. (1825); Arech. Gram. urug. 159, n* 1. Syn: Gymnothrix tristachya H. B. K. Nov. gen. y spec. 1. 113; » » latifolia Schult., Mant., 11. 601; Gris. Pl. lo- rentz. n” 811; Symb. n” 1976; Hieron. Plant. diaph. p. 291. Syn: Cenchrus tristachya (H. B. K.) OK. Rev. 11 ?, 347. N. v. Paja aparejera. St. n* 17,664 y 17,681 (2. vir. 1907) Colonia B>nites, Chaco (N. R. A.). St. n% 19,038 (12. vir. 1903) Parque 3 de Febr. BA. (C. T.) cult ? STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 319) Grama de rizomas nudosos, compactos y leñosos. Las cañas son robustas y derechas de 1-2 m. de altura. Hojas planas, margen es- cabroso, de 40-60 cm. de largo por 2-4 cm. de ancho. Inflorescencia espiciforme densa de 3-5 cm. de largo, por 1-1 */, em. de ancho. Su disposición es axilar y su forma cabizbaja. Florece en otoño, de Marzo á Mayo, y se produce con preferen- cia en lugares húmedos, en las orillas de acequias, arroyos ó rlos, ó en la sombra de grandes árboles. Su consistencia es dura y como forraje merece poca estimación. Por su resistencia se usa para llenar aparejos. Conocida de B-A., Ct., T., S. y recién también del Chaco. (Urug., Bol., Brasil). 103. (10 a, 105 b) Pennisetum montanum (Gkis.) HackEL. En la publicación del 23 de Enero de 1908, vol. xx1. 4, de Pro- cedings of the Biological Society of Washington, la Sta. Agnes Chase refiere de nuevo esta especie bajo el antiguo nombre de Hymenachne montana Gris., pero talvez la autora, sólo haya dis- puesto de un material exiguo para el estudio, ó no se apercibió de la existencia de cerdas, á veces escasas, de que las flores están pro- vistas y por las que se caracteriza el género Pennisetum. Bien que, la planta es un P. anormal con cerdas, casi siempre lisiadas. mM 104. Penisetum nervosum (Nezs.) Prix. Trin. Act. Petropolis. (1835) p. 111; Arech. Gram. urug. p. 161 a (1S9A.). Syn: Gymnothrix nervosa Nees ab Es., Agrost. bras., p. 211; Steud. Syn. 102 n* 6; Doell, in Mart. Flor. bras. 11. pars. 1 p. 302; Peckolt, T. Hist. Plant. ut. y med. do Brasil p. 460 (1890); Lindman, C. A. M. Beitráge z. Gram.- flora Súdamerikas (1900) 34; Hassler, Fl. pile. 1. 39. Syn: Cenchrus nervosus (Nees.) OK. Rev. 11 ?, 34; N. v. Simbol (R. A.) Capim da praia, Grama, Gr. da prala (Bras.). St. n* 20,106 (20. 1v. 1909) cercanías de la estancia San Teo- doro, pedanías Yegua muerta y Villamonte, Dep. Río 1, Prov. Córdoba, en profusión alrededor de ojos de agua, en donde forma conglomeración cerrada. 56 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n* 21,609 (26 111. 1910) Cañada Alegre, Burruyacu, Tuc. (S. G..). Cañas lisas y lampiñas de 80 cm. á 2 m. de altura. Vainas folia- res abiertas y lampiñas. Lámina de 6-10 mm. de ancho, recta, tiesa, prolongada en estirada punta, lampiña, siendo su cara supe- rior y sus márgenes un tanto ásperas. Ligula transversal, angostisi- ma, membranácea, pestañosa. Inflorescencia en espigas terminales, densamente multifloras, de forma cilíndrica; ellas están montadas sobre un eje común y escasamente pilosas, demostrando una cica- triz redonda en la inserción de las espiguillas. Involucela asentada, pelos (6 mejor cerdas) setáceos, extendidos hacía arriba, desiguales y doble más largos que las espiguillas. Pajitas de la gluma cóncavas. Palletas apergaminadas, lanceoladas y puntiagudas. Escamillas membranáceas, transparentes, de forma más ó menos cuadrada. El fruto es un cariopso oval-cilindrico, comprimido con un ombligo oblongado de un color parduzco. Uno de los caracteres por los que esta especie se distingue más fácilmente del P. rigidum es que, en el nervosum las cerdas son dirigidas hacia arriba y son más largas y en el rigidum son dirigidas hacia abajo y más ásperas. Grisebach dice: spiculis purpurascentes, pero más bien son: fus- cescentes. El cocimiento de la raiz leñosa parece ser preconizado como emoliente y diurético. Como planta forrajera no puede ser tomada en cuenta, por la consistencia dura de sus tallos y hojas. La citamos con seguridad por primera vez de las Prov. Córdoba y Tuc., habiendo sido indicado por Lindman del Gran Chaco paraguayo, produciéndose también segun Hassler en el terri- torio de Formosa. Pero fué descrito como del Uruguay y del Brasil. 105. (11a, 109 b) Pennisetum rigidum(Gr:xs.) HackEL. St. n* 18,137 (16. 1v. 1908) Estancia San Teodoro, Río I, C. » » 19,759 (1. xr. 1908) Alrededores de Córdoba. » » 20,106 a (20. 1v. 1909) Estancia San Teodoro, Río I, C. ((2a, 110b) var longisetum Gras. 106. (111 b) Pennisetum villosum R. Browx. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 97 107. Pennisetum an nov. sp.? affine: P. complanato (Nrrs) HackeL. Syn: Gymnothrix complanatus Nees in Bonplandia 11 (1855) 83. St. n* 17,131 ex Lillo n* 4,950 (22.1. 1906) Ciénega de Maimará, Prov. Jujuy á 2,200 metros de altitud. El ejemplar á la vista representa una planta robusta con cañas macizas de 60 cm. de altura, espiga densiflora, amatizada. Por falta de comparación no ha podido ser determinado exac- tamente por ahora. STENOTAPHRUM Trix. 108. Stenotaphrum dimidiatum (L.) Brox6N. Brongniart, Bot. Voy Coq. 127 (1829). Syn: Panicum dimidiatum Lin. Spec. ed. 1. p. 57 (1753). » Rottboellia dimidiata Lin. f. Suppl. 114 (1781). » » » Swartz, Mag. amic. nat. cur. berol. 1v. (1810) p. 89. $. 5. var. «, genuinum HackeEL nov. nom. Spiculis ternis vel quinis. (Asia, Africa.) var. f. americanum (SciraNk.) Hackel nov. nom. Spiculis geminis singulisve. Syn: Ischaemum secundatum Walt. Flor. carol. p. 249 (1788). » Rottboellia tripsacoides Lam. Ill. 1. p. 205 (1791). » » stolonifera Poir. in Lam. Encycl. vr. 310 (1804). » Stenotaphrum americanum Schrank, Hort. Monac. p. 98 (1810) et in Flora Regensb. Beilage (1824) p. 27. 28, Syn: Stenotaphrum sarmentosum Nees ab Esenb., Agrost. bras. p. 93. Syn: Stenotaphrum glabrum Trin. Fund. Agr., 176 (1820); Gram. Panic. (1826) p. 60 et Act. Petropol. (1835) p. 190; Arech. Gram. 538 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. urug. p. 163 n* 1 (1896); Peckolt, T. Plant. med. é ut. bras. (1891) p. 458. ? Syn: Stenotaphrum secundatum («secundum») OK. Rev. 11 194 (1891). Syn: Stenotaphram glabrum. Trin. « americanum Doell., in Mart. Fl. bras 11. 2. 30 tab xxx1x. Los ejemplares determinados por Grisebach en Symb. n* 1981 y verosimilmente también los referidos por Hieronymus en Plant. diaph. p. 291 con este nombre pertenecen á la especie Rottboellia compressa L.f. var. fasciculata (Lam.) Hackel, como puede con- frontarse en F. Kurtz, Collect. Fl. arg. in Bol. Ac. Nac. cienc. Cór- doba t. xvi. p. 266. N. v. Pasto chato, Capim papuan, Grama miuda (Bras). St. n* 17,480 (15. 11. 1907) Estancia «El Espinillo» en las Sierras cerca del mar, en la proximidad de la estación Coronel Vidal F. C. S. Prov. B-A. (M. E). Grama cespitosa, estolonifera y rastrera, que tiende á formar céspedes densos y á veces extensos. El punto vegetativo se pre- senta como la cabezuela de un espárrago verde, siendo la raspa floral achatada y con hendiduras por séries alternas en una de sus faces, en la que nacen las espigas cortas y comprimidas. Ella flo- rece desde Diciembre á Febrero, prefiriendo terrenos humifero- arenosos ó medanosos en las costas del Atlántico. El cocimiento y la infusión de esta planta son empleados con cierto éxito en varios países sudamericanos en enfermedades del higado, de las vías urinarias y hasta en las sifilíticas. Siendo su gusto dulce y su consistencia tierna y jugosa, la hacienda lanar y vacuna la apetece con avidez, estimándola los paisanos como forrajera de importancia. Por cuya causa ellos recomiendan su propagación, más, siendo de fácil crecimiento, es en alto grado apreciado para asegurar y afianzar terrenos move- dizos. Citamos por primera vez esta planta de la R. A., perteneciendo los ejemplares encontrados á la var. f. americana. Esta es frecuente en los terrenos ribereños del Rio de la Plata en la vecina Rep. del Uruguay; así, que es probable exista fuera de la Prov. B.-A. también en Entre-Rios y Corrientes. Es citada asimismo del Brasil y de una gran parte de la Amé- rica meridional, mientras que la variedad z. genuina se produce en Asia y Africa. STUCKERT: GRAMINACEAS ARGENTINAS. 59 VI. ORYZEARE. PHARUS (P. Br.) Law. 109. (112b) Pharus glaber H. B. K. Hassler, Fl. pile. 1. 33. N. v. Pasto del bosque. St. n* 18956 (23. vi 1903) cercanías de Resistencia (Chaco) (H. M.)-Form. LUZIOLA Juss. 4110. (13 a, 113 b) Luziola leiocarpa Lixpx. St. n* 18,746 (11. 1908) cercanias de Córdoba. » » 18,186 (16,1v. 19083) entre plantas de Panicum velutinosum Nees. en una quebrada húmeda por Chelco, Rioja (F. $S.). ORYZA L. 114. Orvza latifolia Desv. Desv. Journ. Bot. (1813) 77; Morong, Enum. Pl. parag. p. 267. Hassler, Fl. pilc. 1. 33. Syn. Oryza sativa L. var. latifolia Doell, in Mart. Fl. bras. u. 2.7. sti. N.v. Alpiste falso (Chaco) Arroz. St. n” 18,950 (23. vr. 1903) Resistencia, Chaco (H. M.). Como las demás especies de arroz, esta grama crece en las ori- llas de lagunas ó ríos (preferentemente en las del Rio Paraná) pero también en lugares sombrios dentro de los montes. Sus cañas llegan á una altura de 1-2 m. recostándose á veces. Las hojas son de consistencia blanda y demuestran un largo de 30-35 cm., por 1 */,-4 cm. de ancho en la base con el nervio medio blanquizco y prominente. Las vainas foliares presentan un color 60 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. rojizo por unlado y al revés verde; las hojas son algo ásperas en sus bordes, pero lisas en el centro, sus vainas foliares abrazan á las cañas. Panoja erecta de 25 cm. de largo, compuesta de ramitas simples erguidas de S-10 cm. de largo, naciendo de 1-4 juntas en la raquis cubierta de un penacho de pelos sedosos, en la base de cada hace- cillo. Las espiguillas son blancas de 6-7 mm. de largo, las glumas esté- riles subuladas de 3 mm. de largo; las fértiles son aquilladas y poseen dos nervios laterales. La quilla y los nervios son verdes, algo velludos, con una arista bastante larga; palleta escabrosa, terminando en punta corta y aguda. Pasto que á veces crece sumergido bajo el agua en lugares de poca corriente y que proporciona un buen forraje. Su dispersión geográfica es Chaco, Formosa (Paraguay, Brasil). Ya que hemos conseguido una especie indigena perteneciente al género Oryza, séanos permitido dedicar algunas palabras acerca de otra especie del mismo género, cultivada en muchos parajes de nuestras provincias del Norte, como ser en T. S. J. Orán, Ch. Corr. ó sea de la: 1142. Oryza sativa Lux. Lin. spec. pl. 465; Hieron. Pl. diaph. p. 283; Peckolt, Pl. ut. € med. Bras. 299, Arech. Gram. urug. 181. N. v. Arroz, A. blanco, A. comun, A, ordinario. El arroz es planta anual, de terreno anegadizo, cañas lampiñas, erectas, surcadas de 60, 100 cm. y aún más de altura. Vainas fo- liares verde-pálidas, abiertas en el ápice. Ligula multinerviada, puntiaguda y bastante larga. Lámina subrigida de 20-30 cm. de largo y relativamente ancha. Panoja terminal comprimida, gene- ralmente erecta ó á veces cabizbaja, ramas aisladas. Espiguillas cortamente pediceladas, comprimidas. Flores hermafroditas, con seis estambres vermellón. La gluma lleva cuatro pajitas, dos infe- riores cartilaginosas y dos superiores apergaminadas. Las palletas también son apergaminadas, la inferior aquillada y profunda- mente quinquenerviada, la superior cortamente aquillada triner- viada. El fruto es un cariopse comprimido envuelto por la glumela, llamada «Cáscara de arroz», de forma elíptica, estriado-surcada, STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 61 de color amarillento-parduzco, aguzado hacia ambas extremidades. La parte interna del fruto, liberado de su envoltorio, es el que constituye lo que llamamos: Granos de arroz ó sencillamente Árroz. Es de un color blanco ó ceniciento, etc., según clase. Parece que su patria extricta es el Sud de las Indias Orientales y aún hoy se lo encuentra en estado silvestre en la gran China, en donde sigue siendo cultivado desde cerca de 3000 años antes de nuestra era. Su cultivo se ha propagado progresivamente en casi todo el orbe, en suelos regables ó sumergidos bajo el agua y cuya topografía plana se presta para su cultura. Y precisamente, á causa de que el arroz se cria en aguas estancadas y necesita para su crecimiento ciertos grados de calor (+ 23” C.) engendra nece- sariamente cierta fermentación, debida á la putrefacción de par- tículas vegetativas, desprendiéndose de ahí mismo, que infectan la atmósfera y provocan á su vez una serie de enfermedades, como la malaria (Chuchu) y otras. Por este motivo su cultivo cerca de pobla- ciones ha sido prohibido en varios países, por ejemplo en Francia. Los granos de arroz constituyen uno de los más importantes y prin- cipales alimentos (en la Asia meridional casi exclusivos) sobre todo para los pobres. Reune condiciones altamente estimables, pues á más de ser un buen alimento, es de un sabor agradable, de facilísima digestión y obtenible á bajo precio. El arroz es uno de los alimentos más sanos y sus granos contienen un 83-96 Y, de almidón. En compa- ración de cualquier otro cereal, proporciona la mayor cantidad de alimento producido sobre una superficie determinada, y es el que suministra la nutrición de tal vez la mitad de toda la población humana del orbe entero. Aunque no puede negarse la inmensa utilidad, que el arroz presta, hay que tener sin embargo en cuenta, que sus granos en- cierran pocas substancias nitrogenadas. En virtud de ser cosa comprobada por análisis y experiencias, que los cuerpos nitro- genados son aquellos que dan la plasticidad á la sangre y aumentan en una manera casi directa sus glóbulos rojos, el arroz hasta cierto punto, no debe ser considerado como el alimento más perfecto, ni más adecuado para la confortable y necesaria nutrición de un tra- bajador. De ahí se explica, que los chinos y malayos, razas CUyos alimentos diarios casi exclusivamente consisten de arroz, tengan una constitución tan débil, flaca y estenuada, como la tienen. Los frutos del arroz no pueden ser utilizados tal cual se los recoje, como los granos del trigo, es menester someterlos á dife- 6 Km MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. rentes manipulaciones mecánicas. La primera es la de descasca- rarlos, á cuyo objeto se usan una especie de molino peculiar, en el que, por medio de un movimiento rotatorio se los despoja de sus glú- melas duras y adherentes, tratando en seguida los granos pelados nuevamente por otras máquinas, á propósito para pulirlos ó sea para imprimirles lustre exterior, para que se manifieste su trans- pariencia ó diafaneidad. Los granos de arroz son empleados no sólo como alimento para múltiples manjares, sino también en la medicina, sirviendo su coci- miento para bebidas refrigerantes, emolientes y antidiarréicas, etc. Su almidón sirve para diferentes aplicaciones industriales y medici- nales. Puede obtenerse también de ellos por el medio de fermenta- ción una especie de cerveza y por destilación el aguardiente llamado «Arac». En cuanto á producción obtenida en el país, carecemos de datos cuantitativos, tanto más, cuanto la producción no alcanza á igualar al consumo. LEERSIA SwARTZ. 1143. (14a, 114b) Leersia hexandra Sw. Hassler, Fl. pilc. 1. 33; St. n” 20,012 (1. 1v. 1909) Rio IV, C., Form. VII. PHALARIDEAE. PHALARIS L. 114. ((5a, 115b) Phalaris angusta Ners. St. n” 16,098 (24. x. 1906) Los Cocos, Punilla, C. » » 16,292 (26. xr. 1906) Colonia Benites (Chaco) (N.R.A..). » » 17,477 (1. 11. 1907) La Barrancosa, B- A.(M. E.). » » 19,206 (1. xr. 1908) Col. M. Belén (Chaco) (H. M.). » » 19,309 (15. x1. 1908) cercanías de Córdoba. » » 19,740 (31. x1r. 1908) Vela, B-A. (M. B.). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 63 forma macra HackeL nov. forma. Differt a typo, culmo 8-20 em. alto, panicula 1,5-4 cm. longa, saepe violascente y. rubescente. St. n?” 20,403, 403a, 529, 517 (15-16. x11. 1909) Villa Garcia, cercanias de Tanti, Dep. Sta. Maria, Córdoba. 145. ((6a, 116 b) Phalaris canariensis L. Según datos oficiales fueron cultivados en 1908 con Alpiste 526 hectáreas en la Prov. de Córdoba y 371,516 hect. en toda la repú- blica. 146. (117b) Phalaris intermedia Bosc. ANTOXANTHUM L. 117. Antoxanthum odoratum Lin. Lin. Sp. pl. ed. 1. p. 28 (17153); Arech. Gram. urug. p. 242 n? 1; P. Dusén, Sv. Exp. 217; Macloskie, Exp. pat. 166; Wildeman. «Bélgica» 35; N. v. Grama de olor. St. n* 16,101 (30. x. 1906). Alrededores de Córdoba, probable- mente escapado de la cultura. Grama cespitosa con cañas derechas y delgadas, que alcanzan á una altura entre 20 y 50 cm. Hojas cortas, estriadas y puntia- gudas, el nervio medio algo prominente. Panoja floja en forma de espiga de 4- 6 cm. de largo. Una conglo- meración de muchos individuos produce un lindo césped, pero no es de rinde como forrajera, 4 pesar de ser muy apetecida por el ganado. Cortada y desecada exhala un pronunciado olor 4 cuma- rina, el que comunica al heno y aún á la carne de animales mante- nidos en prados donde abunda esta especie y por lo que adquiere un sabor particular. Planta encontrada por aqui á acullá en la R A., pero origina- ria de Europa. (Islas Malvinas, Patag.). 64 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. HIEROCHLOÉ (J. G. GmEL.) R. Brown. 118. Hierochloé utriculata (R. € P.) KunrH. Kunth, Enum., 1. 31; Gay, El. chil. vr. 253; F. Phil. Cat. Pl. chil. p. 325; Syn: Torresia utriculata Ruiz € Pavon, Syst. Fl. peruv. 251. N. v. Ratonera (Chile). Los caracteres de la especie progenitora son los siguientes: Cañas simples robustas, enderezadas, algo ásperas. Vainas flojas, ásperas sobrepasando los entrenudos, ásperos como las vainas. Ligula oval, entera, truncada. Algunas hojas planas, otras com- primidas, pero todas puntiagudas muy largas, de 12 mm. de ancho; ásperas por ambos lados, la superior corta y enrollada. Panoja densa, espiciforme, linear ó linear - lanceolada de 12 - 15 cm. de largo, siendo la vaina abrazada por la hoja superior. Ramos cortos enderezados, pedicelos pilosos, espiguillas de 6 mm, de largo, presentando en su parte inferior dos flores masculinas y en la superior una fertil. La especie es enteramente desdeñada por los animales, siendo citado Chile como su patria. var. juncifolia HackeL nov. var. Differt a typo foliis junciformibus (nec planis). St. n” 17,997 (20. 111. 1901) valle de Ávilas, Chubut, Patagonia (N. I. N.? 222) (non H. antarctica R. Br). VII. AGROSTIDEAE. ARISTIDA L. 119. Aristida Adscensionis L. specimen anomalum St. n” 18,854 ex Lillo n* 9,958 (1. 1908) Tafi, Tuc. á 2,000 m. Ovariis fungo quodam infectis. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 65 (Ta, 118b) var. argentina HackeL St. n* 16,895 (29. 1. 1907) Las Rosas, La Falda, C. » » 17,305 (11. 1907) La Falda, C. » » 17,669 (2. vir 1907) Col. Benites, Chaco (N. R. A.). subvar. densiflora HackeL nov. subvar. Differt a typo panicula densissima, habitus A. Adscensionis v. caerulescentis subv. condensatae Hackel. St. n* 20,532 (16. x11. 1909) Villa Garcia, cercanias de Tanti, Dep. Sta. María, Córdoba. (119b) var. breviseta HackrEL (Sl a, 123 b) var. caerulescens (Desf.) HAckEL Lillo et Stuckert de muchos números y de variadas procedencias de las Prov. C. R. Ct. y Tuc. (124 b) forma ad var. modestam HackeL vergens. St. n* 20,014 (1. 1v. 1909) Rio IV, C. (82 a, 125 b) subvar. condensatla HackerL St. n* 17,197 y 256 (12. 111. 1907) La Diana, Dep. $. Martín, Rioja. » » 18,256 (16. 1v. 1908) Chelco, Rioja (F". $.). » » 19,999 (31. nr. 1909) Dal. Vélez, F. C. and,, C. (1Sa, 120 b) var. laevis HackEL (Sla, 121 b) var. modesta HackeL St. no 17,709 (v. 1907) Río I, C. » 18,738 (16. 1v. 1908) ibidem. var. pumila (Decsnk.) Coss. et DURAND Coss. et Durand, Fl. alg. 11. 84 (1855). Syn: Aristida la Decsne, An. $. C. Nat. Sér. 11 1v. (1833). ANAL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xIv. Marzo 13, 1911. 5 66 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n” 17,619 (10. v. 1907) Quebrada del Zapato, cercanias de Catamarca (M. E.). Citamos por primera vez esta variedad, conocida del Sur de Europa y Norte de Africa, ella se diferencia poco de la variedad modesta. Hackel. (19a, 122b) var. scabriflora HaAckEL 120. Aristida humboldtiana Trin. € Rupr. Trin. € Rupr. Gram. agrost. p. 118; G. Vasey, Contrib. from the Ú. $. Nat. herb. vol. 111. n? 1 (1892) p. 47. Syn: Aristida divaricata Humb. € Bonpl. in Willd. Enum. hors. berol. 1. 99 (1809) et Humb., Bonpl. € Kunth, Nov. gen. et spec. 1. 123 (1815). St. n” 171,760 ex Lillo no 5,687 (9. 1.1907) Tatí, Tue. Especie perenne, de suelos áridos y secos, cañas simples erectas de 20-30 em. de altura, hojas estrechas y convolutadas, inflores- cencia desparramada, espiguillas de escasas flores, las glumas lle- van aristas laterales. Forraje sin importancia. Grama hasta la fecha sólo conocida desde Texas al Sur de Cali- fornia y México. 121. Aristida longisela SteuD. Steud. Synops. Pl. Gram. 1. 420 (1855). Syn: Aristida fasciculata Torr. var. Nuttalii Thurb. in Beal Grasses N. A. 11. 208 (1896). Grama perenne, densamente amacollada, verdemar, lisa, de 10-40 cm. de altura, con numerosas hojas basales involutadas; cañas simples y erguidas, presentando generalmente sus inflores- cencias una coloración rojiza. Las vainas foliares son estriadas y más cortas que los internodios; la lígula tiene fleco pestañoso; las hojas nuevas aparecen apretadamente enrolladas, son de 2-11 cm. de largo y de consistencia tiesa. Las basales son numerosas y á menudo recurvadas, semejándose también á ellas las superiores. Las panojas son paucifloras, exsertas, las ramas son solitarias, (26 3 en los nudos inferiores) ascendentes, á veces sólo con 3 4 flores. Las espiguillas son rojizas y bastante largas. Las glumas STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 67 estériles son desiguales, la primera, es más corta que la gluma fértil, ó sea de 11 mm. de largo, apenas escabrosa en la quilla, aguzada ó con una punta muy corta; la segunda gluma excede en mucho al largo de la gluma fértil, alcanzando á casi 20 mm., siendo en todo lo demás, semejante á la primera. La gluma fértil mide alrededor de 14 mm. incluyendo el «callus», que es densamente pubescente y cuyo largo puede estimarse en cerca de 1 mm.; ella es inferiormente lisa y escabrosa en la parte superior. Las vainas foliares, de un largo de más ó menos Y mm. son escabrosas y bastante iguales. Distribución geográfica de la típica: En suelos secos del Oeste de la América boreal, desde Dakota á Arizona. var. robusta F. Lamson-Scribner en Circular n? 34- Washington-May 24 1901-Unit. Stat. Dep. of Agric. p. 3-5. St. n” 16,021 (2. x. 1906) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 16,806 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, Dep. Punilla, Prov. Córdoba, á 1000 m. de altitud. (M. E.). Esta variedad se distingue por su forma densamente apanojada, cañas robustas de 30-40 cm. de altura; inflorescencia más tiesa y las hojas generalmente más largas, que en la típica. Sus glumas, tanto las estériles como las fértiles, se asemejan á las de la especie, siendo además ambas notablemente agrietadas en el ápice. Pero, mientras que las estériles terminan en escabrosas aristas de próxi- mamente 2 mm. de largo, las fértiles son casi lisas Ó apenas es- cabrosas. 3 Forraje inferior. Planta recién citada como de la R. A. 122. (53 a, 126 b) Aristida mendocina Phi. St. n* 17,092-263 (3. 1. 1907) La Diana, S. Martín, Rioja. >» » 113381 (15. 1v. 1907) Chelforó, Terr. Río Negro (M. E.). » » 19,893 ex Lillo n* 6,226 (4. 1v. 1907) La Banda, Sgo. Est. 123. Aristida multiramea HackEL nov. speg. Tab. 1.—fig. a.-C. Stuckert, Herb. arg. n* 16,506 /12. 1. 1907) Capilla del Monte, Dep. Punilla, Prov. Córdoba, á 1,000 m. de altitud, remitido por el Sr. Mario Estrada. 68 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n.* 18,455 (12. 1. 1908) Ochoa, Dep. Sta. Maria, Prov. Cór- doba á 1,000 m. de altitud. St. n” 19,570 (16. x11. 1908) Casa Bamba, Sierra Chica de Córdo- ba, 4 800 m. de altitud. Perennis caespitosa, florendi tempore sine innovationibus. Culmi erecti, 20-30 cm. alti, subrobusti, teretes, glaberrimi, farc- ti, rigidissimi, 3-4 nodi, internodio imo omnium longissimo dimidium culmum aequante, non solum e basi sed. etiam (sal- tem vetustiores) e nodis 2-3 ramosi, ramis fasciculatis 2-4 elongatis erecto-patulis floriferis, longioribus interdum ramu- losis, ramulis brevibus foliiferis. Folia pro ratione plantae pauca, parva glaberrima glaucescen- tia. Vaginae internodiis 2-pluries breviores, plerumque a culmo so- lutae, teretes; Ligula e ciliis brevibus facta; Laminae anguste lineares acutae, saepius convolutae, rarius pla- nae, 3-6 cm. long., 1,5 mm. (explicatae) latae, rigidae, extus laeves, intus prominenter crassinervis, scabra. Panicula linearis, spiciformis, 4-6 cm. long. paupera, rhachi laevi, ramis brevibus appressis, laevibus, inferioribus 2-31 superioribus solitariis, in maxima parte unispiculatis, vel 3-4 spiculatis, spiculis erectis, breviter v. longiuscule pedicellatis, seseimvicem parum tegentibus. Spiculae lineares, sine arista circ. 10 mm. long., flavo-viridulae. Glumae steriles lineares, apice minute bidentulae, inter denticu- los minutissime mucronulatae vel muticae, Í-nerves, promi- nenter carinatae. L. 5-6 mm. longa, in carina scabra. IL. 9-11 mm. longa, carina laevi. Gluma fertilis sterilem superiorem aequans, linearis, tubulosa, callo brevissime barbulata, scabra, apice haud rostrata neque eum arista articulata, aristae ramis subaequalibus 10-12 mm. longis basi complanatis ibique semigyro tortis et angulo recto patentibus scaberrimis. Palea 1 mm. long. hyalina, obtusa. Antherae 3 mm. long. Species peculiaris propter culmi ramificationes nulli nisi A. di- chotomae Michxa. comparanda, cujus culmi vero dichotomo- ramosi sunt i. e. rami solitarii, qui in nostra fasciculati. Ce- STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 69 terum A. dichotoma differt aristis lateralibus quam media pluries brevioribus, etc. Esta especie es excepcional por el modo de crecer. Ella es segu- ramente perenne, por haber encontrado cañas alteradas por la intemperie y en parte comidas; demostración evidente de haber provenido del año anterior. Sin embargo, falta en la época de la eflorescencia toda seña de innovaciones, como ser hojas basales fasciculadas, las que suelen encontrarse en la mayoría de gramináceas perennes. Digno de notar es también que, mientras que en todas las res- tantes especies del género, asi como en la mayoría de las graminá- ceas en general, el primer miembro del tallo es el más corto, acon- teciendo en nuestra planta justamente lo inverso, siendo la longi- tud de la parte inferior á veces igual 4 2-3 partes subsiguientes juntas. 124. (127 b) Aristida murina Cav. St. n* 17,413 (6 11. 1907) Quequén, B-A. (M. E.). » » 17,429 (10. 111. 1907) Tornquist, B-A. (M. E.). » » 19,738 (31. xn. 1908) Vela, B-A. (M. B.). 125 (S4 a, 128 b) Aristida pallens Cav. genuina. St. n* 16,873 (12. 1. 1907)] : . 19,436 (18. xr. 1908) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). > > » 20537a (16. x11. 1909) Villa Garcia. Tanti, C. á .1,000 m. alt. forma brevi-aristata HackeL nov. forma. Differt a typo aristis brevioribus, ad A. complanatam Trin. vergens. St. n” 18,327 (18. xm. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). (129 b) ad var. intermedia Tr1x. accedens (130 b) var. macrochaeta HaxkcrL. 70 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 126. Aristida Spegazzinii ArECHAVALETA. Arech. An. Mus. Nac. B-A. t. 1v, p. 177, fig. 1 (1894). Gram. urug. p. 247 n* 3 (1894). var. genuina HackeL ? Hackel, in An. Mus. Nac. B-A. t. x1, ex Stuckert, Contrib. Gram. arg. 1. p. 93. St. n” 14,437 (25. x. 1904) Marcos-Juárez, C. (131 b) Syn: Aristida pallens Cav. var. tenuicula Hackel in An. Mus. Nac. B-A. t. x1rr. ex Stuckert, Contrib. Gram. arg. n. p. 452 Ho ASL.p.p: St. n* 15,269 (13. x1r. 1905) Rio IV, C. (132 b) Syn: Aristida pallens Cav. ad var. tenuifolia Nees accedens, Hackel in An. Mus. Nac. B-A.t. x1r. ex Stuckert, Contrib: Gram. arg. n. p. 452 n* 132. St. n” 16,682 (29. x11. 1906) | Los Cocos, San Estéban, Dep. Pu- » » 20,987 (20. xu1. 1909)f nilla, Prov. Córdoba. ' 19,737 (31. x11. 1908) Vela, B-A. (M. E.). » » 20,153—93 —876—881—21054. (18-21. x11. 1909) en dife- rentes puntos de la estancia «Pampa de San Luis», Achala, C. á 2,000 m. alt. Especie bastante vistosa, con aristas largas y sedosas; alimento inferior para las haciendas. La citamos por primera vez de la Prov. de Córdoba, siendo men- cionada como de B-A. (Uruguay). (S5 a, 133 b) var. abbreviata HackeL (S6 a, 135 b) var. pallescens HackeL St. n” 12,022 (10 xr. 1902) Col. Ruiz Videla, Rio II, C. (131 b) = Aristida pallens Cav. v. tenuicula Hackel p. p. Stuckert, in Contrib. Gram. arg. 11. 452, n* 132, forma colorata HackeL nov. forma. St, n” 19,396 (10. x11. 1908) Rio IV, C. La designación pallescens ha sido aplicada para la variedad con STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. dl cierta impericia, pero el n” 19,396, excepto la coloración, con- cuerda con ella. 427. Aristida venustula AreECcHAVALETA. Arech. An. Mus. Nac. de Montevideo, tomo 1v, p. TY, in Flora uruguaya (1903). var. scabrifolia HackeL nov. var. ad inter, vel species nova? Differt praecipue foliis scabris junceis. N. v. Flechilla morada (Ch.). St. n? 19,195 (5. x. 1908) Colonia Margarita Belén, Chaco ELM... Se precisa mayor cantidad de material para efectuar un estudio más detenido. La típica es próxima á la A. murina, pertenece á las del grupo de espiguillas mayores y se caracteriza según Arechavaleta por: Panoja poco sobresaliente, tenue, abierta, de pocas espiguillas ca- bizbajas, rojo-violáceas intensas, Gluma 1% de + 17 mm., 3-ner- viada, nervio medio escabroso. 11.* de +30 mm., l-nerviada, nervio liso prolongado en punta larga aguda; III.* de 14 mm. de largo, comprimida lisa. Arista capilar de 8-9 cm. Forraje poco adecuado. Nueva para la R. A., descrita como del Uruguay. Aristida an? nov. spec. St. no 19,858 ex Lillo n* 4,271 (27.11. 1905). Rio Blanco, Tafi, Tuc. á 2,300 m. de altitud. Ejemplar único y exiguo. SIMEA 128. (ST a, 135 b) Stipa brachychaeta Gor. St. n” 18,992-999 (12. 1. 1907) Cap. del Monte, C. (M. E.). » » 19,859 ex Lillo n? 8,014 (29, 1x. 1903) Barracas Sur, B.-A. » »21,027-29 (19. xt. 1909) Quebrada Calderón, Estancia 192 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES Pampa de San Luis, ped. Candelaria, Dep. Cruz del Eje, C. á 2,000 metros altitud. 129. (136 b) Stipa caespitosa (Gris.) SPEG. genuina. St. n* 19,860 ex Lillo n* 3,650 (14, 1v. 1904) Ciénaga, Tafi, Tucu- mán á 2,500 m. de altitud. var. elata Speg. Stipeae plat; 19 St. n* 17,763 ex Lillo n* 5,668 (9. 11. 1907) Tafí del Valle, Tuc. á 1,600 m. alt. et Lillo n* 3,526 (10. 1v. 1904) Infiernillo, Tafi, Tuc.; á 2,600 xa. alt., citada antes como especie tipica. St. n* 19,861 ex Lillo n* 3,525 (10, 1v, 1904) Karapunan, Tafi, Tucumán. St. n* 19,862 ex Lillo n* 5,474 (24. 1. 1907) Tafí, Tuc. Nora.—El Dr. Spegazzini ha demostrado, que la especie es sus- ceptible de gran variabilidad, de modo que su variedad elata, difiere tan pronunciadamente del tipo, como mi variedad Lilloi; asi que, por mi parte, también no he titubeado en presentarla como mera variedad, en la cual verdaderamente sólo las hojas demues- tran una importante discrepancia y no los órganos florales. Hackel. var. Lilloi HackeL nov. var. Differt a typo culmo elato (ad 70 cm. ) gracillimo d-nodo infer- ne scaberulo, folíis valde elongatis (innovationum ad 40 cm. long.) e basi angustata plerumque convoluta linearibus super- ne planis, spiculis paullo brevioribus (3,5 mm., nec 5 mm. longis), gluma fertili manifeste clavato oblonga, coronula sub- distincta obliqua terminata, arista 5-6 mm. longa. St. n* 17,752 ex Lillo n* 5,024 (8. vi. 1906) Anfama, Dep. Tafí, Prov. Tuc. á 1,600 metros de altitud. 130. (89 a, 137 b) Stipa Clarazii BaLt. 131. (90 a, 138 b) Stipa cordobensis SPEG. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 13 132. Stipa filiculmis Der:izE. Delile, Ind. sem. Hort Monsp. (1849) p. 7; Speg. Stip. plat. p. 144 n” 43; Pl, Tandil p. 53 n*327; Arech. Gram.urug. p. 324; F. Kurtz, Collectan. Fl. arg. p. 45. Syn: Stipa ceresensis OK. Rev. 11”. 369 y 371. N. v. Paja voladora. St. n* 17,109 (v. 1907) Estancia San Teodoro, Rio 1; C. » » 17,985 (4. 111. 1901) Río Corcovado, Chubut (N. IL n* 19 sub ea nomine). Grama cespitosa con rizomas multicaules. Cañas de 40-80 cm. de altura, lisas ápica mocho. Ligula reducida, bifida. Lámina fili- forme enrollada, de 25-30 cm. de largo. Panoja oblongo-estrecha, densiflora de 15-25 cm. de largo, .ramitas subverticiladas. Espigui- llas de 6-7 mm., puntiagudo-lanceoladas. Forraje inapreciado, Area geográfica: Chub., Neuq., B.-A., Sf., C. (Urug.). 133. (140b) Stipa filifolia Nrres 134. (91a, 141 b) Stipa hyalina Nes St. no 16,115 (30. x. 1906) Córdoba. » » 19,031-47-47a (12. vi. 1908) Parque 3de Febr. B.-A.(C. T.). » » 19,863 ex Lillo n” 8,416 (26. 1v. 1598) B.-A. » » 18,292-294 (18. x11. 1907) Marcos Juárez, C. » » 21,077 (20. xtr. 1909) Est. Pampa San Luis, Achala, C. á 2,000 m. alt. St. n” 21,388 (x11. 1909) Alta Gracia, Rio II, C. 135. Stipa hypogona HaxeL nov. spec. Stuckert, Herb. arg. n* 17,397 (15. 11. 1907) Estación Tornquist, F.C. $S., Prov. Buenos Aires, recibido del Sr. Mario Estrada. Perennis. Innovationes intravaginales. Culmi erecti, teretes, glabri infra paniculam scaberuli, circ. 20-30 cm. alti, 2-3 nodes, simplices. Vaginae teretes, arctae, sursum scaberulae, ore parce breviterque barbatae. 74 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES Ligula brevis (circ. 1 mm. long.) rotundata, glabra. Laminae convolutae, setaceae v. subjunceae, raro planiusculae, acutae, ES cm. long., diam. 0,5-0,7 mm., rigidae, erectae, viri- des, glaberrimae. Panicula lanceolata, 10-18 em. long., contracta, laxiuscula, stric- ta, rhachi scabra ad nodos barbulata, ramis 3 -4-nis brevibus tenui - filiformibus scabris erecto-patulis, primariis inferioribus 2-4 cm. longis, in?*!, ¿inferiore nudis 3-4- spiculatis, secundarits brevibus 1-2 spiculatis, pedicellis subterminalibus spicula circ. 6-plo brevioribus. Spiculae lineari-lanceolatae circ. 15 mm. long., viridulae palli- de purpureo-variegatae. Gluma 1. spiculam aequans, linearis, longe acutata, superne (in sicco) aristiformi-convoluta, basi trinervis, ceterum uniner- vis, glaberrima, IT. ?/, 1. aequans (10 mm. long.) ei simillima; TIT. (fertilis) lineari-fusiformis, cum callo 2 mm. longo pun- gente breviter pubescente 6 mm. long.; dorso glabra, undique scabro-papillosa, leviter costata, demum brunnescens, apice coronula minuta parum conspicua sed manifeste ciliata, aris- ta haud articulata 6-8 cm. longa bis-geniculata, geniculo infe- riore parum (5-7 mm.) superiore circ. 15 mm. supra basin aristae sito, in parte infima torta, gyris ciliolatis, ceterum sca- bra. Palea obsoleta. Stipa filiculmis Desv., quae nostrae valde affinis, ab ea da/fert laminis elongatis 30-40 cm. longis, culmum aequantibus sca- bris, paniculae ramis plerumque unispiculatisraro bispiculatis, spiculis majoribus (20 mm. longis), glumis sterilibus ad. nervos scabris, fertili apice glabra, aristas genu inferiore in */, aris- tae sito, ejus parte inferiore glabra scaberula, Stipa cordobensis Speg. nostrae atque St. filiculmi pera/finis differt a nostra innovationibus extravaginalibus basi incrassa- tis et squamis aphyllis tectis, laminis elongatis culmum glaber- rimum aequantibus, vaginis laevibus, his uni-bispiculatis, glumis sterilibus subaequalibus, fertili superne tantum papi- llosa, aristae genu inferiore in”/, v. parum infra aristae sito, arista inferne glabra. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 15 E 136. Stipa Ibari PurLieer R. A. Phil., Plant. nuev. chil. An. Univ. Chile v. xcrv. p. 7117 (1896); Niederlein Riq. florest. p. 25; Speg. Col. Bove p. 6. (1883); Speg. Stipeae plat. ex An. Mus. Nac. Montevideo (1901) p. 45 n” 5; et in Nov. add. Fl. pat. ex An. Mus. Nac. B.-A. vin p. 185 n* 653. St. n* 13,313 (vr. 1903) Cerro Morro, rio Gallegos, Territ. Sta. Cruz. (E.C.). Grama débil de aspecto elegante y bonito. Cañas derechas de 10-20 cm. de altura, apareciendo tanto las fértiles como las estériles en su base cubiertas de las vainas blanquizcas y lustrosas. Las cañas y hojas están revestidas de pelos tupidos, cortos y erguidos, mientras que los nudos exhiben pelos blancos más largos, dirigidos hacia abajo. El largo de las hojas llega apenas 4 35 cm., en las inferiores no se apercibe lígula, en la superior la ligula es bilobada, demostrando una vaina inflada, que abraza la base de la panoja. Ella es contrai- da y espiciforme, compuesta de sólo 6 48 flores, sostenidas por pedicelos cortísimos. Las glumas, largamente aristadas, son verdes en la base, más arriba moradas, en los bordes y en el ápice hialinas. Esta especie es escasa y se produce aisladamente, siendo su va- lor forrajero nulo. También su área geográfica queda reducida á ciertos parajes del territorio de Santa Cruz y á lugares vecinos de Chile. 437. (La, 142b) Stipa Ichu (R. € P.) Kunrn. St. n* 17,635 (18. v. 1907) Andalgalá, Cat. (M. E.). » » 17,818 (11. 1907) Capilla del Monte, C. (I3a, 143 b) var. gynerioides (PhiL.) HackEL. St. n* 17,632 (18. v. 1907) Andalgalá, Cat. (M. E.). » » 18,813 ex Lillo n* 5,042 (25. v. 1906) Cerro*Muñoz, Tafi, Tuc. á 4,000 m. alt. St. nv 18,834 ex Lillo n* 7,470 (30 1. 1908) Tafi, Tuc. 4 2,040 m. altitud. St. n* 19.009-10-14 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, C. (M. E.). 76 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. forma interrupta HackeEL nov. forma. Differt panicula inferne interrupta. St. n” 18,989 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, C. (M. E.). 138. Stipa latifolia HackeL € ARECHAVALETA. typica Hackel € Arechavaleta in Anales Museo Nac. B.-A. t vi. p. 183; Gram. urug. (1894) p. 257, n* 3, con lámina n* xxxIx, F. Kurtz, Collect. p. 267; Syn: Stipa latissimifolia OK., Rev. 1. ? p. 352 € 369 (1898). > » manicata Speg. Stip. plat. p. 14 n* 16 (1901) (non Desv.). St. n* 20,402 A 211071 (16. xu1. 1909) Villa García, Tanti, C. á 1,000 m. alt. » AJA , var. grandiflora HaAckEL nov. var. Differt a typo panicula minus composita, spiculis majoribus (13 mon. nec 7-9 mm. longis), gluma fertili 8 mm. nec 4,5 mm. lon- ga. A. St. manicata Desv. (cui St. latifoliam cl. Spegazzini tan- quam varietas adsociat) differt gluma fertili late lanceolata ad omnes nervos pilosa, apice sine coronula distincta ibique ciliis brevioribus subdistantibus munita; in St. manicata gluma fer- tilis anguste lanceolata, carina tantum in *!, inferiore pilosa apice coronula distincta atrofusca ciliisque longiusculis basi cohaerentibus munita. St. n* 17,982 (15. 1. 1901) Cholila, Chubut (N. IL no 193). var. pallens HackEL nov. var. Differt a typo panicula minus composita, spiculis majoribus (11 mm. longis) glumis sterilibus pallide flavo-viridibus (non vio- lascentibus), gluma fertili ad 6 mm. longa, arista circ. 30 mm. longa. St. n* 17,984 (1. 1. 1901) Cholila, Chubut (N. 1. n* 135). La especie típica se encuentra en Tandil, Prov. B.-A. (y en el Uruguay) y ahora la citamos por primera vez de la Prov. Córdoba. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. dN 139. (144 b) Stipa leptostachya Gras. 140. (91 a, 145b) Stipa manicata Desv. St. n* 18,135 (16. 1v. 1908) Estancia San Teodoro, Dep. Río 1, Prov. Córdoba. 141. Stipa megapotamica Serena. Spreng. ex Trin. Act. Petr. 1. p. 11 (18381); Arech. Gram. urug. p. 263 n” 7 (1894); Speg. Stipeae plat. l. c. p. 126 n” 35; Syn: Stipa juncoides Speg. Contr. Flor. ventana p. 68 n* 313. St. n” 16,802 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, Punilla, C. (M. E.) a 1000 m. alt. St. n* 20,702 (18. x1r. 1909) Est. Pampa $. Luis, Achala, C. á 2,000 m. alt, St. n* 20, 899 (20. x11. 1909) Quebr. manzano, Achala, C. Estipa que se diferencia poco de las demás, ni ofrece mayor interés como forrajera. Planta perenne, densamente cespitosa, llegando sus cañas á una altura de 30 - 60 cm., las hojas son isomórfas, verde - pálidas ó, amarillentas angostísimas, de 5-20 cm. de largo. Panoja estrecha. La citamos por primera vez de la Prov. de Córdoba, fué cono- cida hasta la fecha sólo como de la Prov. de B.-A. y del Uruguay. 142. (146 b) Stipa melanosperma Presz. 143. (147 b) Stipa Neaei Nzegs. 144. (95 a, 1458 b) Stipa neesiana Trix. € Ruerr. St. n* 17,483 (15. 11. 1907) Estancia Espinillo, Est. Cor. Vidal, B.-A. (M. E... St. n” 19,013-26-28. (12. 1. 1907) Capilla del Monte, C. (M. E.). » » 19,263 (12. xr. 1908) Capilla del Monte, C. (L St.). » » 19,864 ex Lillo N.” 3,5718 (10. 1v. 1904) La Peñita, Tati, Tuc. 2,500 m. alt. St. n* 19,865 ex Lillo n* 6,442 (13. x. 192) B.-A. 78 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. (96 a, 149 b) forma contorta Hacktz. St. n* 16,102 (30. x. 1906) cercanías de C. » >» 18,108 (16. 1v. 1908) Laguna del Monte, C. (M. E.). » » 19,229 (1. x1. 1908) Colonia M. Belén, Chaco (H. M.). 19,313 (15. x1. 1908) S. Vicente, cercanias de C. forma depauperata HackeL nov. forma. Paniculae ramis unispiculatis suberectis. St. n” 19,606 (22. xx. 1908) Los Cocos, Punilla, C. var. hispidula (Spec., HackEL. Syn: Stipa setigera Presl., forma f. hispidula Speg. in Stipeae platens. p. 97. St. n” 17,762 ex Lillo n* 5023 (8. vi. 1906) Cuesta de Anfama, Dep. Tafi, Tuc. á 1,600 m. altitud. Varigdad conocida desde Río Negro á Salta. (97 a, 150 b) var. virescens Hacker. 145. (98 a, 157 b) Stipa pampagrandensis Sera. St. n” 16,801-04 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, C. (M. E.). 17,417 (6. 11. 1907) Quequén, B.-A. (M. E.). 18,997-19,018 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, C. (M. E.). 146. (99a, 152b) Stipa papposa Ners. St. n” 17,414 (6. 11. 1907) Quequén, B.- A. (M. E.). » » 18,391 (1. 1. 1908) Los Cocos, Punilla, C. » » 19,000 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, C. (M. E.). 19,866 ex Lillo n* 8,417 (12. 1. 1903) B.- A 20,055 (5. 1v. 1909) Carnerillo, Rio IV, C. » » 21,305 (1. 1. 1910) Vela, B.- A. (M. B.). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 19 147. Stipa plumosa Trix. Trin. in Act. Petrop. 1. 67 (1836); Desv. in Gay, Fl. chil. vr. 275 (1853); Steud. Syn. Plant. glum. 1. p. 127 (1855); F'. Phil. Cat. Pl. chil. 335 (1881); Niederl. Rig. flor. p. 28; Speg. C. Bove p. 6; OK. Rev. 11 ?, 3/2 (1898.); Fries, R. E., Alp. Flora arg. p. 172; Speg. Stip. plat. p. 39 n” 2 (1901.) St. n* 18,835 ex Lillo n* 7,447 (30. 1. 1908) Tafi, Tuc. á 2,040 m. alt. Grama de cañas ascendentes de 50-100 em. de altura, lisas, á veces recurvadas en los nudos. Inflorescencia en panoja angosta, formando espiga. Las espigui- llas son bastante apretadas y erguidas y las glumas aristadas. Planta de poco valor forrajero. Su área geográfica es desde la Patagonia por Mend. hasta Tuc. Salta y Jujuy. (Chile.) var. gracilis SpeG. Speg. Stipeae plat. p. 41; St. n* 18,835 ex Lillo n* 7,477 (30. 1. 1908) Tafí, Tuc. á 2,040 m. de altitud. St. n” 18,856 ex Lillo n* 7,960 (5. 11. 1908) Quebrada de Alisos, Tafí, Tuc. á 2,300 m. de altitud. 148. Stipa pogonathera Desv. '—Desv. in Gay, Fl. chil. vr. p. 277 (1853); Speg. Stipeae platens., p. Ll no 3; Suns 983 (1. 1 1901) Cholila, Chubut (N. 1. No) Grama perenne, densamente fasciculada- cespitosa. Cañas pubes- centes de 25 - 50 em. de altura; nudos lisos pálidos. Hojas alternas, macolladas, de 15-25 em. de largo y algo tiesas. Panoja espicifor- me; espiguillas contraídas, glumas con aristas largas, las que se presentan densa y largamente vellosas. Su calidad como forrajera es inferior y la especie se cría ralo en terrenos áridos y arenosos. Puede considerarse su área geográfica desde el territorio de Sta. Cruz, por Chubut hasta el de Río Negro y la Prov. Mendoza (Chile.) SO MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 149. Stipa polyclada HackeL nov. spec. Tab. II. - Fig. a. - e. Perennis. Culmus, si plantis vicinis nititur, erectus, alioquin de- cumbens, gracilis, elongatus, teres, fere farctus, glaberrimus, ex omnibus nodis ramos dense fasciculatos (quinos - duodenos) partim floriferos, partim steriles edens. Rami floriferi sine panicula circ. 10 cm. longi, gracillima, tere- tes, : laberrimi, foliis 6 - 7 vestiti, simplices. Vaginae teretes, arctue, internodio superantes, glaberrimae v. ore parce barbatae. Ligula brevis, truncata, biauriculata glabra. Laminae linearis, plerumque convoluto - setaceae, diam. 0,5 mm., rarius planae, 4-6 cm. long., ad 2 mm. latae, acutae, glabrae, scabrae, flaccidulae virides. Panicula oblonga, laxa, flaccida, patula e. subcontracta, ad $ cm. lony., rhachi tenui - flexuosa scaberula, ramis 3 - 5-ms brevibus (0,5- 1 cm. longis) capillaribus patulis scabris, primariis ultra medium indivisis, 3-4-spiculatis, secundariis 1-2- spicula- tis, pedicellis subterminalibus spiculam subaequantibus reli- quis ea longioribus. Spiculae lineari - lanceolatae, 3 -3,5 mm. longae, pallidae. Glumae steriles aequales, fertilem aequantes vel subcequantes, lanceolatae, acuminatae, hyalinae, glaberrimae; 1. infra api- cem saepe denticulis obsoletis, 1- nervis, [1 3 - nervis, nervis lateralibus brevibus. Gluma fertilis 2,5 mm. long., lineari - lanceolata, chartaceo- membranacea, viridula, demum brunnescens, tota appresse pubescens; callo minuto obtusiusculo breviter barbato, apice sine coronula, ad. aristae insertionem longius ciliata, arista cum gluma tarde articulata, tenuis, 2, 5-3 cm. longa, flexuosa sed non geniculata, haud vel inferne parum torta, scaberula. Palea 0,5 mm. longa, ciliolata. Antherae 1 mm. longae. Herb. E. Hackel ex coll. F. Schickendantz n” 315 (um. 1876), Cuesta de Muschaca, Prov. Catamarca. Stuckert, Herb. arg. n* 17,118 (12. 111. 1907) Quebrada del río de oro, Cerro de minas, Sierra de Ulapes, Dep. San Martín, Prov. Rioja. Stuckert, Herb. arg. n* 17,615 (14. v. 1907) Quebrada de Sebilla, STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. S1 por Chumbicha, Prov. Catamarca, remitido por el Sr. Mario Es- trada. Valde affinis (praesertim habitu) Stipae ramosissimae Trin. (Urachne ramosissima Trin. 1824), Novae Hollandiae incolae, cujus crescendi modus, culmus ramosissimus, paniculae spicu- larumque forma etc. Omnino eadem, quae vero differt a nostra glumis sterilibus manifeste 3 - nerviis, fertili glabro. Obs. Stipa parviflora Cav. ad quam cl. Benth. in Fl. Austr. Sti- pam ramosissimam Trin. ducit, mihi ab hac diversam esse videtur. 150. (100 a, 153 b) Stipa sanluisensis Srr6. 151. Stipa Stuckertii Hackez nov. spec. TAB ACABE Perennis, dense caespitosa, innovationibus extravaginalibus. Culmi erecti, graciles, sine panicula 30-40 cm. alti, teretes, sim- plices, 3-nodes, infra nodos, scaberuli, omnino foliati. Vaginae teretes, arctae, internodiis breviores, glabrae, scabe- rulae. Ligulae lanceolatae acutae y. acutissimae, longe exsertae, folio- rum inferiorum ad 5 mm., superiorum etinnovationum ad 10 mm. longae, plurinerves, glabrae. Laminae convoluto-filiformes, grosse setaceae v. subjunceae (diam. ctrc. 0,7 mm.) sensim tenuissime acuminatae, innova- tionum ad 45 cm. longae, (culmum superantes) culmeae cire. 15-25 cm. longae, omnes erectae, glaberrimae, virides. Panicula linearis v. lineari-lanceolata contracta laxiuscula, basi in vagina summa inclusa, 20-30 cm. lony., 1-2 em. lat., rhachi laevi, ramis binis-ternis subcapillaribus erectis v. erecto-patu- lis laevibus, inferioribus ad 8 cm. longis mox supra basin divisis, secundariis binis-ternis brevibus appressis 1-3-spicu- latis, spiculis subaequaliter dispositis vix contiguis, subtermi- nalibus breviter pedicellatis. Spiculae lanceolatae ad 7 mm. longae superne albo-hyalinae, in- ferne griseo-virides et saepe leviter violascentes. Glumae steriles subinaequales, lineari-lanceolatae, tenuissime cuspidato-acuminatae, 1. spiculam aequans, 1-nervis, vel basi ANAL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, r. x1v. Marzo 14, 1911. 6 82 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. utrinque nervo brevissimo aucta; TU. quam 1. parum (0,6-1 mm.) brevior, 3-nervis, nervis lateralibus dimidiam glumam aequantibus, utraque glaberrima. Gluma fertilis dimidiam spiculam aequans (3,5 mm. long), lineari-subfusiformis (cc. 0,6 mm. lat.), callo brevissimo (vix *ly diametrum glumae aequans) obtusiusculo pilis 1 mm. longis barbato, in *l, inferiore undique breviter laxe appresseque pu- bescens, in *l, superiore praeter lineas 2 pilosulas ad 3/, lon- gitudinis glumae pertinentes, glabra, laevis, anthesi flavo- brunnescens, apice minute ciliato sine coromula manifesta, sed in latere ventrali in denticulum producta, cum gluma tarde articulata, arista circ. 3 em. longa, gracillima, columna sca- berula subflexuosa quam subula parum breviore. Palea parvula (0,58 mm. long.) hyalina. Antherae 1,5 mm. long. Stuckert, Herb. arg. n” 20,737 (19. xtr. 1909). Quebrada de la Oyada, Estancia «Pampa de San Luis», pedanía Candelaria, De- part. Cruz del Eje, Prov. Córdoba á 2,000 m. altitud. Inter species austro-americanas nulli arctius affinis, affinior St. setaceae R. Br. ausiraliensi, quae vero differt, ligula minus protensa (2-3 mm. longa) oblonga, obtusiuscula, paniculae maygis effusae, ramis scabris, gluma fertili quam steriles */y (nec duplo) breviore, ad. apicem usque undique appressa pilo- sula, palea, glumam fertilem subaequante chartacea. Especie algo seca, tiesa y de consistencia un tanto dura, juzga- mos, que su forraje no sea de primera calidad. 152. Stipa sublaevis SprEG. Speg. Stipeae Plat. 1. c. p. 82 n” 82 (1901). St. n* 17,396 (15. 11. 1907) Est. Tornquist F. C. $., B.-A. (M. E.). Estipa perenne cuyas cañas tiesas y lisas alcanzan de 30-100 cm. de altura, tienen nudos lisos y pardos. Todas las hojas son isomor- fas de un color verde pálido y algo duras. Inflorescencia en pa- noja relajada. Las espiguillas son primeramente erguidas y luego cabisbajas. Las glumas son angosto-lanceoladas y de una colora- ción morada ó rojiza y largamente aristadas. Sus semillas (flechi- llas) son temidas como las de la especie neesiana Tr. € Rupr. Antes de florecer es buen pasto forrajero. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 83 St. n% 16,264 (26. xr. 1906) Colonia Benites, Chaco austral. (N. R. A.) En este ejemplar á la vista la gluma fértil aparece por todo el dorso finamente papillosa y no sólo en la punta como indica el Dr. Speg., y las palletas sobrepasan la flor sólo por una tercera parte y no por el doble. Recién la citamos del Chaco, habiendo sido hasta la fecha sólo conocida como de la Prov. B.-A. y del Uruguay. 153.Stipa tenuis PutL. genuina. St. n” 18,993 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, C. (M. E.). (154 b) var. argentina (SpPEG.) SPEG. var. papillosa Hack. nov. var. Differt a typo yluma fertili in 1/¿ superiore saltem dorsi papi- llas minutis scabra. Folia quam in typo longiora. St. n” 18,990-96-19,001-03-23-24 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, Córdoba (M. E.). Planta bastante común y social en suelo árido, representa sólo un valor forrajero insignificante. 454. (101 a, 155 b) Stipa tenuissima Trrx. St. n” 171,634-36 (18. v. 1907) Andalgalá, Catamarca (M. E.). » » 18,988-91-94-95-95-19,002-06-25 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, Córdoba (M. E.). St. n* 19,312-95 (x11. 1908) Córdoba y Río Cuarto. » » 20,404 (16. x11. 1909) Villa Garcia, Tanti, C. var. curamalalensis (SreG.) HackEL nov. var. (193 b) Syn: Stipa curamalalensis Speg, 1. c. St. n” 16,803 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, Córdoba (M. E.). » » 19,004-08-11-12-17-22. » » 19,007 (12. 1. 1907) Capilla del Monte Córdoba (M. E ). 84 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. El número subrayado parece pertenecer á la especie típica de curamalalensis; los otros ejemplares representan sólo más ó menos aproximaciones y formas intermediarias. Los caracteres usados por Spegazzini, de tamaño de la espiguilla, el largo de la arista, la posición de su geniculación no nos parecen suficientes, para dis- tinguirla como especie propia, pues, se combinan de una manera múltiple. 155. Stipa uspallatensis SpEG. Speg. Stipeae platens. in An. Mus. Nac. Montevideo. (1901) p. 120 n* 32. ' 90. "ay Sk 10 19.793 ex Lillo.” 51461, (6-5 1808) Combresicaós ¿ Malamala, Prov. Tucu- » » 19,794 > 2 2 3,515 mán á 3,300 m. alt. Estipa perenne, la que en conglomeración de individuos forma tupidos céspedes de 5-8 cm. de diámetro, en cuyo medio se levan- tan las pajas paucifoliadas de 8-20 cm. de altura. Las hojas demuestran un color amarillento ó verdemar, son lisas y algo tiesas. Inflorescencia muy pobre en espiga angostisi- ma, erguida. La disposición de las espiguillas es relajada y ellas son siempre erectas y apretadas con glumas violáceas, guarnecidas de aristas geniculadas un tanto rigidas. Forraje insignificante. Especie hasta ahora únicamente observada en grandes altitudes de la Prov, de Mendoza y recién en la de Tucumán. NASSE LLA E. Desv. 156. (102a, 156 b) Nassella trichotoma (Ners) HackEL. St. n* 17,399 (15. 11. 1907) Estación Tornquist, F. C. S., Prov. B.-A.(M. E.) St. n*? 21,080 (16. x11. 1909) Villa García, Tanti, C. » » 21,259 (23, x11. 1909) Tanti, C. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 85 PIPTOCHAETIUM J. PresL. 157. Piptochaetium bicolor (Vanz.) Desv. Desv. in Gay, Fl. chil. vi. p. 273; Arech. Gram. urug. p. 271 n* 5. Syn: Stipa bicolor Vabl, Symb. v. 1. p. 24 (1791); OK. Rev. 1112, p. 311 (1898). Syn: Oryzopsis bicolor (Vahl) Speg., Stipeae plat, 6. n? 3. Syn: Stipa intermedia Trin. € Rupr. Act. Petrop. Ser. vr. t. v. p. 26 (1849). St. n* 17,411 (6. 11. 1907) Estancia el Morro en Quequén, Prov. B.-A. (M. E.). Grama cespitosa. Cañas delgadas y erectas de 40-60 cm. de altura. Hojas angostas. Panojas bastante abiertas, erguidas á veces algo cabisbajas. Espiguillas lustrosas de color rojo - morado. Es especie frecuente en ciertos campos graminosos, donde em- pieza á florecer ya desde Octubre. Como forraje es de escasa impor- tancia. El área geográfica que ocupa es la Prov. B.- A. (Urug. y Chile.). 158. (103 a, 157 b) Piptochaetium lasianthum Gras. 159. (158 b) Piptochaetium leiocarpum (SrrEc.) HackEL forma subpapillosa HackeL 160. (104 a, 159 b) Piptochaetium napostaénse (SpeG.) HackEL, 161. (105 a, 160 b) Piptochaetium ovatum Desyv. St. n” 16,294 (26. x1. 1906) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » >» 21537 (1. 1910) Alta Gracia, Córdoba. forma atrata HackEL nov. forma. Differt a typo gluma fertili nigra castanea. St. n* 13,304 (18, x11. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). S6 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. (106 a, 161b) var. chaetophorum (Gris.) HackeL var. purpurascens HACckEL nov. var. Differt a typo glumis sterilibus in */3 inferiore viridibus, in ?/s superioribus purpureis, gluma fertili viridula nec castanea, folia culmum subaequantibus. St. n% 19,189 (5. x. 1908) | Colonia Margarita Belén, Chaco » » 19,298 (1. xr. 1908) ¡ (H. M.). Variedad de glumas rosadas de bonito aspecto. 162. (162b) Piptochaetium ruprechtianum Desv. 163. (107 a, 163 b) Piptochaetium tuberculatum Desv. N. v. Pasto pampa (B.-A.). St. n” 10,565 (15. x11. 1901) Mina Clavero, Córdoba. » » 16,116-145, (2. x1, 1906) Ochoa, Dep. Sta. María, Córdoba. » » 16,683 (29. x1r. 1906) Los Cocos, Punilla, C. » » 17,419 (6. 11. 1907) Quequén, B.-A. (M. E.). » » 19266 (9. x1. 1908) Estancia Sta. Rita, cerca de Vela, F. C. S., Prov. B.-A. (M. B.). St. n” 20,490-575 (16. x1r. 1909) Villa García, Tanti, C., 4 1,000 m. altitud. St. n.* 20,898 (20. xrr. 1909) Quebr. Manzano, Pampa S. Luis á 2,000 m. alt. C. St. n. 21,083 (20. x1r. 1909) Los Cocos, Punilla, C. MUEHLENBERGIA ScHREB. 164. (164b) Muehlenbergia diffusa Wip. St. n% 19,040-41 (12. vir. 1908) Parque 3 de Febrero — B.-A. (10. TI Pp: 165. (165b) Muehlenbergia nana Rexrh. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. Sí 166. Muehlenbergia nardifolia Gras. Symb. n.* 1877; Hieron. Pl. diaph. 295. seno 19/7195 ex Lillo n* 5,378 (1. 1908) Tat, Tue. Grama perenne de rizoma rastrero, tallos aparragados al suelo ó cortamente ascendentes de 15-20 cm. por 5-8 cm. de ancho. Las vainas foliares son pálidas y en la parte superior hasta la margen suavemente vellosas ó lampiñas y mucho más cortas que la hoja. Las hojas son un tanto rígidas, verde-claras, canaliculado-fili- formes, enrolladas en espiral, lampiñas y terminan en una punta finisima, La ligula tiene 6 mm. de longitud y es largamente acu- minada. La panoja es laxisima de 12-15 cm. de largo y sus ramitas algo ásperas son capilares y relativamente distantes entre si; las inferiores son ternarlas, las superiores, sostenidas por pedicelos, más largas que las espiguillas, son binarias ó solitarias. Las glumas estériles son próximamente de 1 mm. de largo, sub- iguales, apergaminadas, lanceoladas y provistas de un aguijón agudo. Las fértiles son más ó menos el doble más largas ó sea de 2 mm. y enrolladas en forma lanceolado-acuminada, rematando en su punta en una arista filiforme próximamente del largo de la lámina. La palleta es linear-acuminada, enrollada, y la longitud de la glu- ma fértil la iguala en largo ó la excede en poco; el «callus» es cor- tisimo y algo velloso. La especie es estimada como forrajera para ovejas. Fué cono- cida del lado Oeste de la Sierra de Achala, Prov. de Córdoba y la citamos ahora por primera vez de la Prov. de Tucumán. 167. (10Sa, 166b) Muehlenbergia peruviana (P. B.) SteuD. St. n* 18,839 ex Lillo n* 7,589 (7. 11. 1908) Río blanco, Dep. Tafí, Tuc. á 2,600 m. altitud. 168. Muehlenbergia phragmitoides Griseb. Griseb. Pl, Lor. n* 781; Symb. n” 1,880; Hieron. Plant. diaph. p. 295; St. n* 17,759 ex Lillo n.* 3,588 (10. 1v. 1904) Barrancas, en Tafi, del valle, Dep. Tafi, Prov. Tucumán á 2,150 m. de altitud. S8 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Grama perenne, erguida, cañas tiesas de 80-100 cm. de altura, hojas estiradas más ó menos lineares, escabrosas y caídas, de unos 30 em. de largo. Panoja alargada de matiz morado, próximamente de 30 em. de largo, bastante ramificada. Las glumas estériles son muy peque- ñas y las fértiles 4-5 veces mayor, llevando una arista flexuosa de una longitud cuádruple mayor. Como forrajera no tiene importancia y hasta la fecha es única- mente conocida de las medianas montañas de Tucumán. LYCURUS H. B. K. 169. (167 b) ELycurus alopecuroides Gras. St. n.* 18,844 ex Lillo n.* 7,817 (7. 11. 1907) Playas de Tafi, Tuc. á 2,000 m. alt. PHLEUM L 170. (1658 b) Phleum alpinum L. ALOPECURUS L. 171. Alopecurus antarcticus VAnz. Vahl, Symb. 1. 18 (1791); OK. Rev. ni?, 339; Skottsb. Flor. fueg. 16; Macloskie, Exp. pat. 179. Syn: Alopecurus magellanicus Lam. 11l. 1. 1. p. 168 (1791) (for- ma antarctica (Vahl) P. Dusén, Sv. Exp. 260). Syn: Alopecurus alpinus Sm. El. brit. 1. p. 1356 (15800) (forma exaristata Kunth, En. 1. 25). Gay Fl. chil. v1. 260 (1853); F. Phil. Cat. p. 316; Speg. Pl. fueg. p. 82 n.* 237; Pl, pat. austr. p. 588 n” 379; Alboff, Tf. ur. p. 42. n” 195; Fl. rais. Tf. xn. n” 473; P. Dusén, Sv. Exp. 217 et Ovíf. Fórh. 258; Macloskie, Exp. pat. 179; Autran, Pl. fueg. 14; Parcs. Nat. 16 n* 25; Rendle, Prich. 323; Wildeman «Bélgica» 39. Syn: Alopecurus variegatus Steud. Syn. Glum. 1. (1855) 148. St. no 19,796 ex Lillo n” 1,349 (13. xr. 1888) La Ciénaga, Dep. Tafi, (Playas pantanosas) Prov. Tucumán á 2,600 m. de altitud. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS, S9 Grama baja de terreno húmedo, cañas erectas lisas de 30 em. de altura. Hojas estrechas subuladas, planas de 5-7 cm. de largo. Espiga cilíndrica ovalada de Y cm. de largo. Todas las glumas de- muestran un color un tanto rojizo, las fértiles son largamente aristadas desde la base, pero más cortas, que las estériles, En cuanto á su utilidad como forrajera, no puede tomarse en cuenta, ó sirviendo cuando más para sostener algún rebaño de ovejas en el Sud de la Patagonia. Hasta la fecha esta especie sólo fué encontrada en la punta Sud del continente americano, Tierra del Fuego, Patagonia austral y territorios del Sud de Chile y su aparición en bastante altitud de las montañas de Tucumán, no deja de ser un hallazgo curioso y de importancia. 172. Alopecurus aristulatus Micnx. Michaux, Flor. Am. bor. 1. 43. (1803). Syn: Alopecurus geniculatusL. var. aristulatus (Michx.) Torrey. Ball. J., Flor. patag. 1. 237: Macloskie, Exp. pat. p. 180. N. v. Gramilla de bañado. St. n* 17,132, ex Herb. Venturi n* 180 (27. 1x. 1902) Barracas al Sud, B.-A. Grama que prefiere terreno húmedo y hasta pantanoso. Cañas robustas y más erguidas, que las de la especie siguiente, de 25-50 em. de altura, con la geniculación menos pronunciada. Hojas de 5-10 cm. de largo, acabando en punta fina. Vainas foliares casi de] mismo largo que los internodios. h Espiga cilíndrica de 3,5-1 cm. de largo, densamente florida. Gluma fértil, casi siempre aristada y la arista doble más larga que la gluma. Proporciona un regular forraje. Fué indicada ya de la Patagonia y de la Prov. B.-A. Especie que se encuentra extremosamente estendida desde el Atlántico al Pacifico de la América boreal, é introducida también en la Austra- lia y la Asia, pero considerada originaria de Europa. 173. Alopecurus geniculatus Lix. Lin. Sp. pl. ed. 1. p. 60 (1753); Lams.-Scribn. Am. grass. 1 133 ad 115. Speg. Nov. add. Fl. pat. An. Mus. Nac. B.-A. vir. 184 n* 649, St. n* 19,797 ex Lillo n* 6,442 (29. 1x. 1902) cercanías de B.-A. 90 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Especie que habita cañadas y terrenos bajos. Cañas ascenden- tes, á menudo encorvadas hacía los nudos inferiores, de 20-35 cm. de largo, en cuyos intersticios presentan 4 y aun más nudos, pat- ticularmente cuando están recostadas. Hojas de 2?/,-5 cm. de largo, siendo las superiores más cortas y su vaina foliar más inflada. La espiga es cilíndrica y compacta, mide 2 */,-3 1/, cm. de largo por 4 mm. de grueso. El largo de las espiguillas apenas pasa de 2 mm. Las glumas estériles que son obtusas y unidas en la base, tienen el nervio medio guarnecidas de escasas pestañas; las fértiles, algo semejantes en la forma son más largas. Buen forraje. Citada ya de la Patagonia austral y recién de B.-A. Introducida de Europa, se ha propagado en muchos parajes de la América meridional y boreal. SPOROBOLUS R. BrownN. 1474. (169b) Sporobolus argutus (Nees.) KunrH. Hassler, El. pilc. 1. 33; 7 (29, x11. 1907) Los Cocos, Punilla, C. » » 16,255 (21. x1r. 1906) Cercanias de Córdoba. 2» 17.074 (3. 111. 1907) La Diana, Dep. San Martin, Rioja. »./1»-:18821 ex tilo (27. nr. 1907) Sgo. del Est. » » 18,849 » » n” 7,936 (1. 1906) Vipos, Dep. Trancas, Tuc. » » 19,198 » >» (1 1906) Rioja (inseguro). 19,799 - 800 ex Lillo (11. 1902) (x11. 1903) B.-A. etc. Form. St. n? 16,08 forma purpurascens HAckEL nov. forma, Differt a typo, spiculis purpurascentibus. St. n” 15,967 (2. x. 1906) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 17,602 (30, xm. 1907) Estación Huillapima, Catamarca (M. E.). St. n” 19,997 (31. 1v. 1909) Villa María, Dep. Río III, C. var. tuberculatus (HackeL) HACKEL nov. nom. (1714 b) Syn: Sporobolus tuberculatus Hackel in Stuckert, Con- trib. 11. Gram. arg. (1906) p. 470. St. n* 18,749 (16. 1v. 1903) Chelco, Rioja (F. $.). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. amb Los ejemplares del número citado representan bastante bien la especie deserita y fueron recogidos en completo estado de madurez de los frutos, pero mojados por la lluvia, prodújose una especie de elutinosidad tar intensa, que las inflorescencias de los diferentes individuos se enmarañaban, adhiriéndose fuertemente entre si, dificultando su separación, y debido á la mojazón pudo apercibirse el arrojamiento de las semillas, fenómeno por el cual se caracteriza cabalmente el género. En algunos de nuestros recientes ejempla- res los tubérculos no sólo eran imperfectamente desarrollados, sino apenas visibles, pareciéndose así muchisimo á la especie progeni- tora polimorfa Sporobolus argutus Kth. Más, con mayor material á la mano, pudimos constatar la exis- tencia de transiciones entre especie y variedad y nos vimos obli- gados á reducir este vegetal, que antes habíamos descrito como especie propia, á lo que es, ó sea á una simple variedad del Sp. argutus Ktbh. Fué el Dr. Lillo el primero, quien opinó ser mera variedad del argutus. 175. (170 b) Sporobolus asperifolius Ners € MeYexN £ypicus. St. n*- 17,352 (11. 1907) La Estela, Prov. B.-A. (M. E.). » » 20,062-62.* (4-5. 1v. 1909.) Abundante en Molino Gamez y Carnerillo, Dep. Río IV, Córdoba. forma spiculis ex parte bifloris HackeL nov. forma. St. n” 16,849 (19. 1. 1907) Río IV, C. La forma es nueva para la ciencia y la especie típica la citamos por primera vez para la Prov. de Córdoba. El nombre asperifolius no corresponde á la calidad de hojas. 176. Sporobolus brasiliensis (Rabn1) HackEL. Hackel in Bull. herb. Boiss. (1904) p. 278; Hassler, Fl. pilc. 1. 33; Syn: Aira brasiliensis Raddi, Agrost. bras. 36 (1824) » Sporobolus ramosissimus Kth., Rev. Gram. 1. 269, t. 46; » Eragrostis airoides Nees, Agrost. bras. 509 (1829); Doell, in Mart. € Eichl. Flor. bras. 11. 3. 137; Arechavaleta, Gram. urug. p. 311; Niederlein, Result. bot. Mis. p. 14. 92 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Syn: Vilfa ramosissima Trin., Mem. Ac. Petersb. ser. 6, t. 5. p. 36 (1840). Syn: Airopsis millegrana Gris. Pl. lor. n* 7/2 (1874); Symb. no 1864 (1879) fide Ind. Kew.; Macloskie, Exp. pat. 197. St. no 17,428 (16. 111. 1907) Estancia la Sierra, Tornquist, B.-A. (M. E.). St. n* 17,764 ex Lillo n* 5,861 (x. 1905) Cerro San Pablo, Tafi, Tuc. á 1200 m. St. n* 18,345 ex Lillo n* 7,837 (12. 111. 1908) Cebil redondo, Tue. » » 19,072 (13. vur. 1908) Canals, Dep. M. Juárez, C. (O. R.). Grama robusta de cañas delgadas, simples y erectas, de una al- tura de 60-100 cm., produciéndose á veces en bastante conglome- ración de individuos, principalmente en terrenos algo húmedos ó en pendientes de cerros, Las vainas foliares son pestañosas en su margen. Las hojas son lineares, estrechas, lisas, un tanto enrolladas en los bordes. La panoja es amplia y desparramada con rayos subvertici- lados, los que sostienen por pedicelos filiformes alargados las di- minutas espiguillas (2 mm. < 1 mm.) de forma elíptico-oblonga. La gluma fértil es cortamente aserrada y su longitud es mayor, que la de la flor. Cariopse ovoideo-globosa. Su existencia queda constatada en Pat. B.-A. C. Tuc. Form. Mis. (Urug. Parag. Brasil.). 177. (110a, 171 b) Sporobolus indicus (L.) P. Bravv. St. n* 12,131 (25. x1. 1902) Ochoa, Sta. María, C. » 16,805 (12. 1. 1907) Cap. Monte, C. (M. E.). » 17,373 (6. 1v. 1907) Lezama, B.-A. (M. E.). » 17,430 ? (16. 111. 1907) Tornquist, B.-A. (M. E.). » » 17,147 ex Lillo n* 5,380 (4. x11. 1906) Cuchillas, Burru- yacu, Tuc. St. n* 17,482-95 (15. 11. 1907) Coronel Vidal, B.-A. (M. E.). » » 18,826 ex Lillo n.” 7,160 (8. xr. 1907) Tuc. » » 21,105 (1v. 1910) Est. Pampa San Luis, Achala, C. (con espigas verde-obscuras). 178. (172 b) Sporobolus ligularis Hacker. 179. (173 b) Sporobolus phleoides Hackez. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 93 180. Sporobolus subinclusus Phrz. R. A. Phil. Sert. mend. 11. p. 49 (1871). St. n.* 17,338 (15. 1v. 1907) Sierra de Chelforó, Territ. del Río Negro (M. E.). St. n* 19,391 (10. xrr. 1908) Río IV, Córdoba. Grama esbelta de cañas lisas blancas y derechas, un tanto rígi- das, de unos 40 cm. de altura, hojas angostas, panoja espiciforme, de la cual la parte inferior se encuentra envuelta en una vaina foliar. Poco adecuada para forraje. Ha sido citada de Mendoza y hoy la mencionamos del R. N. y de C. forma panicula expansa STUCKERT nov. forma. St. n* 20,060 (5. 1v. 1909) Carnerillo, Dep. Río IV, Córdoba. Forma singular de panoja esplayada, en contraposición de la forma común, cuya panoja queda en la parte inferior encerrada en la vaina foliar. EPICAMPES J. PRESL. 181.(112a, 115 b) Epicampes arundinacea (Triv.) Hacken. St. n* 17,402 (15. 111. 1907) Tornquist, B.-A. (M. E.). 182. (176 b) Epicampes caerulea Gris. var. Ssubmutica HackEL. POLYPOGON DESE: 183. (113 a, 177 b) Polypogon elongatus H. B. K. St. n” 16,238 (17. xr. 1906) Los Cocos, Punilla, C. » » 17,359 (11, 1907) La Estela, B.-A. (M. E.). » » 17,403 (15. 11. 1907) Estancia Chapad-Malal, Mar del Pla- ta, B.-A. (M. E.). 94 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n*171,959:(15. xx. 1907):C. » » 20,902 (20. x11. 1909) Quebrada de Manzano, Est. Pampa de San Luis, Achala, C. á 2,000 m. altitud. forma minor HackeEzL. nov. forma. Differt omnibus partibus exceptis spiculis quam intypo fere 3- plo brevioribus. Habitu a typo valde diversus, sed spicutis typicis. St. n” 19,801 ex Lillo n* 8,419 (19. 1. 1903) B var. muticus HackEL nov. var. Differt a typo gluma fertili mutica. Specimen macrum, panicula abbreviata densa, haud lobata. St, n” 17,452 (15. 11. 1907) Estancia Chapad-Malal, Mar del Pla- ta, Prov. B.-A, (M. E.). 184. (115b) Polypogon interruptus H. B. K. typicus. St. n* 17,318 (9. 1v. 1907) Estancia San Teodoro, Rio 1, C. » » 18,874 ex Lillo n* 6,017 (1. 1907) Rioja. var. Crinitus (Triv.) Hacker. St. n* 16,676 /30. x11. 1906) | 17,994 (5. 1. 1901) Cholila, Chubut (N. I. n* 119). La Falda, C. 185. (l14a, 150 b) Polypogon monspeliensis (L.) Desr. St. n* 16,675 (30. x11. 1907) La Falda, C. » >» 17,354 (111. 1908) La Estela, B.-A. (M. E.). a LITO (Tu. AGUS C: » » 19,802 ex Lillo n” 4,947 (23. 1. 1906) Maimará, Juj. forma argentina HackeL. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 95 forma nana STUCKERT, Nov. forma Differt a typo statura minore, culmi usque 3 ad 5 cm. adscen- denti. St. n* 16,833 (17. 1. 1907) Rio IV, C, frecuentisimo en arena hú- meda en las márgenes del rio. AGROSTIS L. 186. (182b) Agrostis bromidioides Gras. 187. Agrostis exaratla Trix. Trin. Diss. 1. p. 207; Gay, El. chil. vr. 309, Kunth. Enum. 1. 220. F. Phil. Cat. Pl. chil. 314; P. Dusén, Svensk, Exp. mag. p. 219; Ma- closkie, Exp. pat. 187. St. n* 17,979 (1. 111. 1901) Rio Corcovado, Chubut, Patagonia (N. I. n* 89) (sub ea nomine). Grama de raiz fibrosa; cañas simples, erectas de 30 - 60 em. de altura. Vainas surcado - estriadas, lampiñas. Hojas lineares, casi siempre erguidas. Panoja estrecha y contraída, de color verduzco, produciéndose los rayos floriferos desde la base. Espiguillas de 3-4 mm. de largo. Glumas subiguales, agudas. La gluma fértil más corta, á veces aris- tada desde su mitad. La palea muy reducida. Forraje de poca importancia. Area geogr.: Fuegia, Pat. austr. Chub. (Chile, Oeste de los E. U. de Norte - América.) 188. Agrostis Hackelii R. E. Frixs. typica. R, E. Fries, Alp. Flora del Norte de la Arg. p. 175, Lam. 1x. a St. n* 18,343 ex Lillo n* 1,814 (1.11. 1907) Playas de Tafi, Tuc. Especie de rizoma rastrero; cañas simples, lampiñas, erguidas rollizas, que alcanzan hasta 1m. de altura. Vainas completamente lampiñas y relumbrosas. Ligula de 5-7 mm. Láminas planas, linea- res y puntiagudas de 5-25 cm. <4-5mm. Panoja laxa, lanceo- 96 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. lada estendida. Glumas iguales hispidas. Paléa inferior blanquizca, lampiña, la superior mínima. Es difícil de juzgar su calidad como forrajera. La típica fué citada de terreno paludoso de Cachinoca, Jujuy, á 3,300 m. alt. y recién también la citamos de Tafí, Tuc. 42.200 m., la forma viridiflora fué mencionada de altitud análoga. (183 b> forma viridiflora HackeL 189. Agrostis hygrometrica Ners? (vel affinis). Nees, Agrost. bras. 404 (1824) Syn: Bromidium hygrometricum Nees « Meyen im Nov. Act. Nat. Cur. xvu. Suppl. 1. 154 (1812); OK., Rev. 11 ?, 342, Syn: Deyeuxia hygrometrica (N. € M.) Speg. Fl. Tandil p. 54 no 331. var. St. n” 18,850 ex Lillo n* 7,954 (25. 11. 1903) Ciénegas en el Cerro Muñoz, Tafi, Tuc. á 3,900 m. de altitud. El ejemplar es algo defectuoso por consiguiente la determina- ción no es absolutamente segura. Especie no muy común. Cañas delgadas, simples de 30 - 50 cm. de altura, dividiéndose á menudo desde la base en cañas laterales. Vainas superiores algo ásperas por su lado superior. Hojas tiesas, angostísimas, plegadas, punzantes. Panoja linear comprimida, un tanto laxa, pauciflora, subcombada. La gluma inferior sobrepasa la superior y ésta á su vez sobrepasa apenas la válvula. Esta últi- ma mide 3 mm. y su fruto es aleznado y lampiño. Forraje insigni- ficante. Citada antes del Tandil, Prov. B.-A. y ahora de Tuc. (Bras.) 190. Agrostis montevidensis SPrENG. typica St. n* 16,809 (12. 1. 1907) Capilla del monte, Dep. Punilla, Pro- vincia Córdoba, á 1,000 m. de altitud (M. E.). St. n* 17,424 (16. m1. 1007) Estancia Tornquist, Sud de la Prov. B.-A. (M. E.). St, n* 21,106a (18. x11. 1909) Estancia Pampa de San Luis, Achala, Prov. Córdoba á 2,000 m. de altitud. Tal vez citamos recientemente la especie típica de la Prov. Cór- doba, habiendo sido conocida antes de B.-A. (Urug.,. Chile). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 97 var. aristata DorLzL. Doell, in Mart. Flor. bras. 1. 1. 27. t. 7. Syn: Agrostis laxiflora «Rich.» var. aristata Gris. Pl. lor. p. 206 n” 778. Symb. p. 294 no 1,874; Hieron. Pl. diaph. p. 247; F. Kurtz, Sert. cord. p. 20. St, no 17,467 (1. 111. 1907) La Barrancosa ad ñ ; * la este - » >» 17481-81a (15. 11. 1907) Estancia? Lo vidal POS «El Espinillo». Prov. B.-A. (M. E.). Nueva para esta provincia, habiendo sido citada antes como de E.-R. (Urug., Chile, Am. bor.). (184 b) var. submutica DorLz. l. c. 28, St. n* 17,978 (1.111. 1901) | Río Corcovado, Chubut (N. I. n* 101) » » 18,001(1. 1.1901) | (N. Ln? 170) 191. (185 b) Agrostis nana Krn. var. aristata Gris. St. n” 17,748 ex Lillo n* 5,613 (4. 11. 1907) Cumbres Calchaquíes, Dep. Tafí, Prov. Tucumán á 1,200 m. altitud. ¿ 192. Agrostis pectinata HackeL er ARECHAVALETA Arechavaleta in Gram. urug. p. 287 n%2 con la lámina n* xxxvr. St. n” 18,314 (18. x11. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). Grama de rizomas cortos. Cañas vigorosas, erguidas y lampiñas de 60-100 cm. de altura. Vainas foliares estriadas. Ligula aperga- minada. Lámina estriada y áspera. Panoja densíflora, derecha, oblongo-lanceolada. Espiguillas numerosas empizarradas, amari- llo-verdosas, á veces amatizadas de morado. Prefiere terreno hú- medo y de costa, floreciendo desde Diciembre á Febrero Pasto substancioso y de regular provecho como forrajero. Nuevo para la R. A., habiendo sido indicado antes como habi- tante del Uruguay. Anar. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, r. xiv. Marzo 16, 1911. =] 98 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 193. (186 b) Agrostis pulchella Krun. St. n* 17,529 (12. vr. 1907) Parque 3 de Febr., B.-A. (C. 'T.). » » 18,829 ex Lillo n* 7,399 (27. 1. 1908) Cerro Muñoz, Dep. Tafí, Prov. Tuc. á 3,200 m. de alt. St. n* 18,836-72 ex Lillo n* 7,583 (7. 11. 1908) Rio blanco, Dep. Tafí, Tue.- (187 b) forma purpurascens F. Kurtz (188 b) forma virescens F. Kurtz 194. Agpostis stenophylla Pur. emend. HAcKEL. Phil. Anal. Uniy. chil. x. 0. 17. p. 10194 Stuckert: Herb. arg. n* 17,999 ex collect Dre. Nicolas 1llin n* 252 (10. 111. 1901) prope Nafofo-Cahuello, Chubut. El Dr. Hackel tuvo últimamente ocasión de comparar ejempla- res auténticos de esta especie, confirmando su determinación; es de advertir, sin embargo, que en la descripción de Philippi, debe haber habido una confusión, pues ninguno de los dos ejemplares á la vista presenta alguna palea, ni menos una de 3 mm. de largo. Especie chilena citada por primera vez de la R.-A, 195. (l16a, 189b) Agrostis verticillata ViLL. St. n* 16,061 (13. x. 1906) Córdoba. » » 19,311 (15. xr. 1908) San Vicente, C. Agrostis sp. an ? nov. ex affte Agr. scotantham Phil. An. Univ. Chil. t. xcrv. p. 16 n” 13 (1897). (187 b, p. p.) Syn: Agrostis pulchella f. purpurascens Hackel in St., Contrib. 11. p. 415 n* 187 b p. p. St. n? 3,089 (1. 1897) Valle hermoso, Mendoza. Ejemplar trunco, consistiendo únicamente en una panoja, pero por la descripción que da Phil. corresponde en cierto modo con la STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 99 A. scotantha, por la panoja pauciflora, por los subverticilos, que son algo distantes, por la cantidad de espiguillas que lleva, sus pedi- celos ásperos, así como por sus anteras moradas, pero diverge algo en otros caracteres. Mend. (Chile). CALAMAGROTIS ADpans 196. Calamagrostis eminens (PresL.) StkEUD. Steud. Syn. 1. p. 191. (1855); OK. Rev. 111?, 344. Syn: Deyeuxia eminens Pres]. Reliqu. haenkean. 1. p. 250 (1890). » Agrostis eminens (Presl.) Griseb. Pl. Jor. n” 776; Symb. no 1872. Grama de cañas erguidas, rollizas, lampiñas, de 50-60 cm. de altura. Nudos lampiños. Vainas foliares laxas, tiesas, lampiñas, es- triadas. Entrenudos largos. Lígula alargada, lanceolada. Hojas con- volutado-cerdosas, estriadas, algo ásperas. Panoja combada de 20 cm. de largo. Ramas fasciculadas en dis- posición alterna, produciéndose preferentemente en su extremi- dad cierta conglomeración de espiguillas. Estas son doradas y en su dorso inferior verdosas, suaves, de 3-4 mm. de largo. Glumas desiguales, con aristas rectas, del largo de la palea. Forraje se- cundario. La típica ha sido citada de M. C. R. Ct. (Perú). forma brevipila HackeL. nov. forma. Differt a typo pilis a callo glumae fertilis ortis vix dimidiam glumam aequantibus parcioribus. St. n* 17,157 ex Lilllo n” 5,045 (25. y. 1906) Cerro Muñoz, Dep. Tafí, Prov. Tuc. á 4,050 m. de altitud. 197. (190b) Calamagrostis erythrostachya (Desv.) Hacken. 198. Calamagrostis fuscata (PresL.) STEUD. Steudel, Nomencl, ed. 11. v. 1. p.250 (1840) et Synops. 1. 191 (1855). 100 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Syn: Deyeuxia fuscata Presl, Reliqu. haenkean. 1. 240 (1830). St. no 17,740 ex Lillo n* 5,044 (25. v. 1906) | Cerro Muñoz, Dep. AS 4 Tafi, Prov. Tuc.á » >» 19,803 > » » 4,250 (24. 18l, 1905) 4, 100 m. alt. Sus cañas, lampiñas y erectas, se elevan á una altura de unos 30 em., vainas subescabrosas, las hojas son enrollado-cerdosas, algo escabrosas y más cortas que las cañas; la panoja es espicl- forme contralda. Planta de consistencia algo seca, que se presenta más bien aislada y en grandes altitudes, razón por la cual no puede apre- ciarse su utilidad como forrajera. La mencionamos por primera vez de la Argentina, siendo indicada como del Perú, de altitudes análogas. 199. Calamagrostis (Deyeuxta) Hackeli LiLLo nov. spec. Tab. 1v. Fig. A. 1-5. Syn: Calamagrostis capitata Hackel msc. (non Deyeuxia capitata Weddell). St. n? 17,743 ex Lillo n* 5,602 (2. 11. 1907) en la margen de un arroyo de las cumbres calchaquies Dep. Tafí, Prov. Tucumán á 4,400 metros de altitud. Perennis, dense caespitosa, innovationibus intravaginalibus. Culmi erecti, 8-16 cm. alti, teretiusculi, glaberrimi, specie enodes, vizx ad medium usque foliati. Vaginae laxissimae, dilatatae, summa ventricosa, glaberrimae, emortuae mox marcescentes, fuscae . Ligula ovalo-lanceolata, longe producta (4-7 mm. long.), acuta, apice saepe fissa, glaberrima, lateribus in vaginam decurren- tibus nervosa. Laminae setaceo-convolutae, 1-3 cm. longae (summa saepe mu- croniformis) acutiusculae, rigidulae, glaberrimae. Panicula capituliformis, densissima, ovata, 1,5-2 cm. lony., 1-1,5 cm. lat., rhachi ramisque glaberrimis, his brevibus semiverti- cillatis 3-5-nis sese approximatis, ramo primario in semiverti- cillis inferioribus multispiculato, secundariis 3-5-spiculatis, spiculis imbricatis, breviter v. brevissime pedicellatis. Spiculae lanceolatae, 4,5 mm. long., aureo-fulvae nitentes. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 101 "Gl umae steriles subaequales, lanceolatae, obsolete carinatae, hya- lino-membranaceae glaberrimae; LI. angustior, acutiuscula, integra, nervo medio a Lasi ad */, im- feriorem producto utrinque vitta viridi notato percursa. TI. latius lanceolata, acutiuscula vel obtusiuscula, apice inter- dum + erosula, breviter 3-nervis, nervo medio a basi ad 1/,, lateralibus ad */¿ glumae tantum preductis, utrinque viridi- vittatis. Gluma fertilis sterilibus */,-, breviore (3 mm. lony.), ovali- oblonga, truncata, irregulariter 6-1-denticulata, denticulis triangularibus enervits, haud mucronulatis, hyalina, basti S-nervis, nervo-medio ad */,, lateralibus ad Y, glumae produc- tis, viridi-marginatis, undique ettam callo glaberrima, mutica. Palea glumam aequans, oblonga, truncata irregulariter d-den- tata, ecarinata, in */, inferiore binervis, hyalina, glaberrima. Lodiculae parvulae. Antherae 1,8 mm. long. Processus rachillae 0,8 mm. tantum longus glaberrimus. Species eximia in genere anomala propter glumae fertilis callum glabrum, processum rhachillae etiam glaberrimum, aristae defectum. Habitu, foliis, inflorescentia, glumarum indole convenit cum C. chrysostachya Hack. (Deyeuxia chrysostachya Desv.), sed ca- llus processusque in hac breviter barbati, gluma fertilis arista- tata (arista « 7 16/884 aa 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 18,343 (20. xrr. 1906) C. » » 19,044 -45 (12. vrr. 1903) Parque 3 de Febr. B.-A. (C. T.). » » 19,55” (15. vr. 1908) Col. Marg. Belén, Chaco (H. M.). » » 19,482 (18. x1r. 1908) Col. Benites, Chaco (N. R. A.). » » 19,805 ex Lillo n* 7,159 (8. xr. 1907) Tuc. B.-A. Form. Mis. (195 b) var. subcontracta DorLL. 204. (196 b) Calamagrostis nardifolia (Gris.) HAckEL. St, n* 17,739 ex Lillo n* 5,046 (25. 1. 1905) Cerro Muñoz, Dep. Tafi, Tuc. á 4,100 m. de altitud. 205. Calamagrostis neglecta (Enrn.) GAERTN. Gaertn. Mey et Schreb. Fl. Wetter. 1. 84 (1799); Macloskie, Exp. pat. p. 196. Syn: Arundo neglecta Ehrh. Beitr. 1v. p. 137 (1791). » Calamagrostis neglecta P. Beauv. Agrost. 157 (1812). » Deyeuxia neglecta Kth. Gram. 1. 76. » Arundo stricta Timm. en Siemssen Meckl. Mag. 1. 236. » Calamagrostis stricta Nutt. Gen. 1. 47; Spreng. Syst. 1. 253, STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 108 St. n* 17,998 (1. 11. 1901) entre Bolson y Colonia 16 Febr., Chubut, Patagonia (N. I. n* 230). Especie con raíz rastrera, cañas simples, comprimidas, tiesas y lampiñas de 40 - 60 cm. de altura. Hojas lineares, afiladas, planas, á veces convolutadas y algo ásperas en sus márgenes. Lígula exser- ta, obtusa. Panoja angosta, abierta de 8-15 cm. de largo. Glumas iguales, oblongo-agudas, más ó menos del mismo largo de la flor; la palea mide la mitad del largo de la gluma fértil. La arista, insertada en la mitad de la gluma, es recta y de igual largo que ella. Ha sido citada de la Tierra del Fuego, del Territorio de Sta. Cruz y ahora del Chubut. (Am. bor., Europa). Fué citada también para el Sur del Continente sudamericano la especie €. poaeoides Steud., ad calcem Lechl. Berberid. am. citata. (E. Phil. Cat. Pl. chil. 319; Speg. Pl. fueg. p. 84 n* 297; Plant. pat. austr. p. 583 n* 392; Alboff, Flor. rais., Terre feuxtr. 492; Macloskie, Exp. pat. 196; Wildeman, «Belgica» 4); pero según la descripción, esta especie no presenta ninguna diferencia fundamental con la C. neglecta (Ehrh.) Gaertn. y si después de cotejados ejemplares efectivos, no resultase sinónimo directo de ella, quizás formaría una débil variedad, que en tal caso se expresariía por: €. neglecta (Ehrh.) Gaertn. var. poaeoides (Steud.) Hackel. 206. Calamagrostis patagonica (SPEG.) MACLOSKIE. Macloskie, Exp. patag. 193. Syn: Deyeuxia patagonica Speg. in Nov. add. ad floram patag. in An. Mus. Nac. B.-A. t. vrr. p. 191 n* 681. St. n* 17,987 (8. 111. 1901) Río Corcovado, Chubut, Patagonia (N. L no 106). Grama cespitosa, multicaule, todas sus cañas son fértiles, ergui- das y algo tiesas y alcanzan á una altura de 35-50 cm. Vainas foliares distantes, las inferiores parduzcas y las superiores pálidas semiduras. Las lígulas son cortísimas y las hojas erectas. Panoja subespiciforme erguida de 10-20 cm. de largo, á menudo subcompacta. Los rayos de las ramitas en disposición semiverti- cilada. Las espiguillas siempre derechas, apretadas y de forma angosto -lanceolada. Glumas aristadas con aristas retorcidas. Consistencia algo dura y probablemente insignificante forrajera. Especie peculiar del Chu but 104 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 207. Calamagrostis (Deyeux1a) pulvinata HAckEL nov. spec. Tab. IV.—fig. B. 1-4. Stuckert, Herb. arg. n* 17,150 ex Lillo n* 5,609 (30. 1. 1907) pla- yas del arroyo Liquimayo en las Cumbres Calchaquies, Dep. Tafi, Prov. Tucumán á 4,200 metros de altitud. Perenmis, pulvinos densos 6-9 cm. altos formans, ex quibus culmi floriferi non vel parum emergunt. Culmi erecti, teretes, glaberrimi, uninodes, nodo inter folia fere omnia basilaria abscondito. Vaginae teretes, arctae, glaberrimae, emortuae mox marcescentes. Ligula brevissima (0,5 mm. long.) truncata saepe emarginata v. auriculata - biloba, ciliolata. Laminae tenuiter setaceae v. subcapillares (diam. 0,4-0,5 mm.), acutae 2-3 cm. long., flaccidulae, curvatae, glaberrimae, palli- de virides, intus crassinerves. Panicula lineares v. lineari-oblonga spiciformis, 2-3 cm. long., 0,5 cm. lata densa, rhachi superne scabra, ramis brevibus 3-4- nis erectis scabris, longioribus 2- brevioribus 1- spiculatis, spi- culis plerisque longiuscule-subterminalibus breviter-pedice- llatis, subimbricatis. Spiculae lineari-lanceolatae 6 mm. long. viridulae. Glumae steriles aequales, lineari - lanceolatae, longe acutatae, apice porrectae v. leviter extus curvatae, l-nerves, carina scabrae ceterum laeves. Gluma fertiles sterilibus ,-*]/, brevior (4 mm. long.), lanceolata acutiuscula breviter bilacinulata lacinulis ab nervos laterales excurrentes bimucronulatis, callo brevissime barbulata, cete- rum gylaberrima, obsolete d-nervis; arista in”*/,-1/, inferiore inserta, tenuis, geniculata, laevis, glumam fertilem haud v. paullulum excedens. Palea gluma *¿ brevior, linearis, obsolete bidentula, carimis laevis. Antherae minutae (0,3 mm. long.) Processus rhachillae vix 1 mm. longus, pilis ejusdem longitu- dinis parce barbatus. Affimis O. fuscatae Steud. sed ab hac glabritie omnium, culmo e caespite vix exserto v.omnino in illo latente distincta. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 105 208. (118 a, 197 b) Calamagrostis rosea (Gris.) HackEL forma typica St. n* 17,749 ex Lillo n* 5,608 (31.1. 1907) Pajonales, Cumbres Calchaquíes, Dep. Tafi, Tuc. St. n* 17,154-55 ex Lillo n* 5,656-51 (5. 11. 1907) Infiernillo, Tafi, Tuc. St. n* 18,831 ex Lillo n* 7,441 (27. 1. 1908) Cerro Muñoz, Dep. Tafi, Tuc. á 3,900 m. alt, St. n” 19,807 ex Mus. bot. Univers. Córdoba n” 6,829 (10. 11 1890) frecuente en la región superior árida del Cerro Champaqui, Sierra Achala, C. á 2,200 m. alt. (199 b) forma arista altius inserta Hacker (198 b) forma spiculis pallidis HackeL (200 b) var. viridula Hacker St. n* 17,156 ex Lillo n* 5,469 (4, 1. 1907) Pajonales en Anfama, Dep. Tafí, Tuc. 209. (201 b) Calamagrostis spiciformis HackeEL IX. AVENEAE ATRA L, 210. Aira caryophyllea L. Lin. Sp. pl. ed. 1. p. 66 (1753); Steud. Syn. Glum. 1. 221 n* 35; Gay, El. chil. vr. 333; Speg. Nov. add. ad flor pat. in An. Mus. Nac. B.-A. t. vr. p. 192 n* 682; Macloskie, Exp. pat. p. 198. Syn: Avena caryophyllea Waber in Wigg. Prim., fl. holst., p. 10 (1780). N. v. Pelillo plateado. 106 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n* 17,995 (4. 111. 1901) Río Corcovado, Chubut (N. I. n* 174, sub Agrostis umbellata «Colla» ). St, n” 17,996 (1. 11. 1901) Río Corcovado, Chubut (N. I. no 137). Planticula de cañas esbeltas, cespitosas, lampiñas de 10-20 cm. de altura. Panoja plateada laxa, siendo la disposición de sus rayos en di-ó tricótomos. Ligula de 3 mm. de largo. Las hojas son de 1-3 cm. de largo, de consistencia blanda, entretejiéndose á veces. Las espiguillas son erectas, de color plateado. Glumas de 2-8 mm. de largo, aovado-agudas, uninervadas, la gluma fértil es más corta y provista de una arista dorsal. Regular forraje para ovejas. Su área geográfica: Islas Malvinas, varios puntos de Patagonia, (Chile, América boreal y Europa). DESCHAMPSIA P. BrEauv. 211. Deschampsia aciphylla (Francuer) Sera. Speg. Plant. ad Fuegia p. 89, n* 255; P. Dusén, Svensk. Exp. til Magell. ur. p. 222. Speg. Nov. addend. ad flor pat. An. Mus. Nac. B.-A. t. vir. p. 193 n* 684; Wildeman «Bélgica» p. 40; Alboff, Flor. rails. Terrefeu xt1. n* 506; Autran, Pl. Feu. p. 14. Syn: Aira aciphylla Franchet, Miss. Cap. Horn. V. Phanerog. p. 384 (1889). St. n* 18,000 (1. 1. 1901) Rio Corcovado, Chubut (N. I. n* 167 sub D, tenella («Phil.»). Planta cespitosa de cañas delgadas y lisas de unos 30 cm. de altura. Hojas lineares en forma de alfiler, frecuentemente más cortas que las cañas y sólo con una ó dos en cada caña. Ligula lanceolada. Panoja linear alargada con rayos escabrosos, capilares, erguidos, producidos á lo largo de la raquis, glumas inferiores violáceas y el largo de la flor no excede el de las glumas; la infe- rior es sesil y la superior de la raquis barbada, es contornada de pelos. Puede ser que presta servicio como forraje de ovejas. Su área geográfica es: Tierra del Fuego, Patagonia austral. 212. (202b) Deschampsia andina Pnrz. 213. Deschampsia antarclica (Hook.) Desv. ? Desv. 1n Gay, El. chil. vi. 338; F. Phil. Cat. 321; Hieron, Pl. diaph. p. 302; Speg. Pl. fueg. 80 n”. 254; Speg. Nov. add. Fl. pat. in STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 107 An. Mus. Nac. B.-A. vn. 192 n* 683; Alboff, Terrefeu trr. 45 n* 206. Flor. rais. Tf. x111. n* 513; F. Kurtz, Collect. Fl. arg. in Bol. acad; cienc. Córd. xvI. p. 260; P. Dusén, Svensk, Exp. till Magell. 111. 221 (1901); Macloskie, Exp. pat. 200; Autran, Pl. Feu p. 14. St. n* 13,303 (vr. 1903) en la cercanias de Rio Gallegos, Territo- rio Santa Cruz (E. C.) St, n* 19,087-87 a (vi. 1903) en las cercanias del Río Gallegos, Territorio Santa Cruz (E. C.). Syn: Aira antárctica Hook. lc. Pl. 11. (1837) tab. CL.. Flor ant. 1. (1844) p. 377 tab. 133. Syn: Monandraira patula R. A. Phil. An. Univ. Chile (1873) p. 565; Cfr. Speg. l. c. Grama baja cespitosa de 5-7 cm. de altura. Las hojas son relati- vamente largas, subulado-lineares y enrolladas, Panoja desparra- mada de 10-15 cm. de altura. Las espiguillas son de forma lanceo- lada, con una ó dos flores y rudimento de una tercera. Glumas también lanceoladas, ásperamente aquilladas, excediendo su largo el de las flores. La gluma fértil, profundamente hendida, lleva ' una arista basal derecha. Es una grama insignificante, pero es considerada como una de las fanerógamas más australes; desgraciadamente la muestra no permite una determinación absolutamente segura, por encontrarse en un estado algo defectuoso. Su dispersión geográfica se extiende por las Islas Malvinas, Fue- gla, S. Cruz, Chub., Mend. (Chile). 214. Deschampsia caespitosa (L.) P. Beauv. P. Beauv. Agrost. p. 160 (1812) Syn: Aira caespitosa L. sp. pl. p. 64(1753); Rendle, A. B., Mr. Hes- keth Prichards pat. plants, in the Journ. of Botany Brit. € Foreing. Vol, xLH. p. 323. St. n” 17,992 (1. 11. 1901) entre Bolson y Colonia 16 Febr., Chu- but, Patagonia (N, I. n* 226). Grama de raíz densamente cespitosa, con cañas de 30-40 cm. de altura, hojas planas, en su cara superior bastante ásperas. Panoja amplia, desparramada ó piramidal. Pedicelos escabrosos. Arista apenas introrsa, en el fondo algo torcida, cerdosa, casi siempre del largo de la gluma. Regular forraje para ovejas. Area geográfica: Sur de Patagonia (Europa). 108 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. TRISETUM Pers. 215. Trisetum sclerophyllum HackeL nov. spec. Perenne, Culmi 6-12 cm. alti, robusti rigida teretes, superne pubescentes, omnino vaginati, 1-nodes, nodo suprabasilar:. Vaginae teretes, arctae, firmae, glaberrimae, vestutae stramineae demum fuscescentes, diu persistentes. Lizula brevis (1 mm.) truncata, ciliata. Laminae lineares, in parte superiore angustatae, obtusae, planae v. siccitate subconvolutae 2,5-6 cm. (summa via 1 cm.) longae, 2-2 5 mm. latae, subtus glaberrimae, supra obsolete puberulae, valde rigidae, virides, margine scaberulae, nervis crassis con- tiguis percursae. Panicula spiciformis lineari-obllonga, obtusa 4-6 cm. long., 1-1,5 em. lat. densissima, rhachi villosu'a, ramis binis v. solitariis brevibus suberectis rigidis pubescentibus fere a basi spiculiferis, primariis inferioribus ad 1 cm. longis 3-5-spiculatis, spiculis imbricatis subsessilibus v. breviter pedicellatis, pedicellis hir- sutis. Spiculae obovatae 3-florae cum pedicello floris quarti, 8 mm. longae, flavo-viridulae, rhachillae internodiis brevibus villis quam ipsa duplo longioribus vestitis. Glumae steriles subequales (1. parum brevior et angustior), lan- ceolatae, in acumen setaceum attenuatae, glabrae, ¿-nerves carina scabro-ciliolatae. Glumae fertiles e sterilibus haud exsertae, inferiores 7 mm., supe- riores 6 mm. longae, lanceolatae, sensim acutatae, bimucrona- tae, tenuiter 5-nerves, flavo-virides, toto dorso pilis porrectis albis 1-2 mm. longis vestitae, callo pilis */z-*/3 glumae aequantibus barbato, dorso ceterum scaberulae, marginibus superne late hyalinae, in medis dorso ev. paullo altius aristam exserentes porrectam ev. leviter recurvratam haud geniculatam neque tortam circ. 8 mm. longam basi ciliolatam superius sca- bram. Palea glumam aequans, lineari-oblonga minute bidentula, carinis scaberula. Antherae ovali-oblongae 1,2-1,5 mm. longae. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 109 Stuckert, Herb. arg. n* 17,991.- Patagonia, Territ. Chubut, inter Cholila et Coloniam 16 de Febr. ex collect. Doct. Nicolás Hlin n” 148 (20. 1. 1902). Affine T. lasiolepi Desv. et T. Preslii Desv.; T. lasiolepis differt a nostro (e descriptione) culmo binodi, panicula anguste-lineari macra viridi- purpurascente, spiculis 9 mm. tantum longis, bifloris cum pedicello floris 11., glumis sterilibus obtusis, 1. 1- nervi, feríilibus dorso fusco-viridibus, arista refracta glumam aequante. T. Presli differt vaginis puberulis, panicula elliptica, spiculis 6 mm. longis bifloris, glumis sterilibus obtusis, 1. I-nervi ferti- libus dorso fuscis, arista ut in lasiolep1, palea gluma */,-*/, brevior, antheris 0,56 mm. longís. T. Buchtieni Hackel; lasiolepi valde affine, differt eodem modo ac illud, ceterum culmo superne longe mudo, aristis angulo recto patentibus 3 mm. longis. Inflorescentia T. sclerophylli aristis longis porret pro planta humili magna est (culmum dimidium aequat). Folia multo rigidiora, spiculae majores quam in speciebus naffiibus. 216. Trisetum subspicatum (L.) P. Beau. P. Beauv. Agrost. p. 38 (1812). Syn: Aira subspicata L. Syst. nat. ed. 10 p. 873 (1759). » Avena subspicata Clairv. Man. p. 17 (1811). var. phleoides (Krá.) HackeL Hackelin P. Dusén, Svensk. Exped. til Magellansl. 111. 222 (1901). Syn: Trisetum phleoides Kunth, Enum. 1. 295 (1833); Macloskie, Exp. pat. p. 205 et 961. St. n” 13,308 | | Cerro Morro, cercanias del Río Ga- » » 19,088 | | — llegos, Territ. Santa Cruz (E. C.). Grama de cañas sencillas de 10-50 cm. de alto, Las vainas foliares aparecen como atercio peladas y son de 3 cm. de largo. Ligulas es ca- riosas, tallos aplanados. Panoja espiciforme de color plateado ó ro- jizo, de 3-10 em. de largo. Espiguillas achatadas de sólo 2-3 flores. Las glumas estériles son sublanceoladas de más ó menos 5 mm. (vi. 1903) 110 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. de largo, las fértiles de casi igual largo, pero aristadas. Como fo- rrajera presta poca utilidad. Su dispersión geográfica es: Islas Malvinas, Fuegia, Pat. austr. y la de la típica también los territorios australes de la R. A. (Chile, Am. bor., Nueva Zelandia, Australia y las regiones árcticas de Europa y de Asia). AVENA L. 217. (203 b) Avena fatua L. (204 b) et var. glabrata PererRmANN 218. (119 a, 205b) Avena hirsuta RorH 219. Avena ludoviciana Dur. De Mazs. Durieu de Maisonneuve in Actes de la Société linn. Bordeaux. xx. (1855) 1. 41. Syn: Avena sterilis Ind. Kew. (non L.). St. n* 18,473 (20. 1. 1908) Los Cocos, Punilla, Córdoba. Especie de avena, anual, raíz fibrosa. Vainas y hojas lampiñas ó escasamente pilosas. Ligula breve, aovada ó truncada, denticu- lado-franjeada. Panoja, en la mayoría de casos, amplia, combada, en otras veces subcombada ó en pleno desarrollo, plana y laxa- mente extendida; simple ó compuesta. Las espiguillas son generalmente bifloras, con el rudimento de una tercera flor y miden unos 20 mm. de largo. Su eje es lampiño. Las glumas son bastante anchas, lanceolado-acuminadas, sub- iguales, las inferiores tienen 7-9 nervios y las superiores 9-11, las que sobrepasan las flores. La flor inferior es articulada con un callo obtuso vellosísimo. La «foveola» es aovado-elíptica, apenas articulada y próximamen- te de 10-12 mm. de largo, adelgazándose hacia su ápice bicuspi- dado. Ella demuestra 7 nervios y es desde la base hasta su medio contornada de pelos rígidos y acompañada de una arista genicu- lada del largo de 15-18 mm. El cariopse es linear, aguzado, encon- trándose la base provista de un pequeño pico, en el que se nota una manchita angostísima umbilical, STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. e Planta por cierto involuntariamente introducida de Europa (Sur de Francia y España) en donde es común en lugares de tie- rras calcáreas, al lado de los caminos y terrenos incultos. Aquí es considerada como perjudicial para los alfalfares y es en donde ella, abunda. Como forraje en estado verde, es excelente y las semillas prestan servicio en la nutrición de la hacienda caballar. La cita- mos por primera vez de la KR. A. 220. (120a, 206 b) Avena sativa Lix. St. n* 16,485 (20. xr. 1906) Córdoba. Según datos oficiales, la producción de _4vena en 1908 ha sido calculada de la Prov. Córdoba en 2,500 toneladas y de la R. A. en- tera en 492,770 toneladas, de modo que resulta ser 4 la par del. maiz, trigo y cebada, uno de los cereales cultivados en mayor escala. 221. Avena scabrivalvis Trix. Trin. in Mém. Acad. Petersb. ser. vI.t. 4. p. 28 (1836), E. Desv. in Gay, El. chil. vr. 356, t. 19, fig. 2; F. Phil. Cat. 317; Arech. Gram. urug. p. 302 n? 3; St. no 19,807 ex Lillo n*? 8,041 (28. 1x. 1903) cercanías de B.-A. Grama de cañas rectas, sencillas de 40-80 cm. de altura. Hojas planas, lanceoladas. Panoja estrecha y erguida, relativamente larga (10-18 em.). Espiguillas 2-4 flores, en pedicelos claviformes, coronadas de pelos y munidos de un penachito lateral externo de cerdas largas blancas. Planta anual y poco social, Citada por primera vez de la R. A. (Urug. Chile). 222. (207 b) Avena sterilis L. DANTHONIA D.C. 223. Danthonia cirrata HackeL € ÁRECH. genuina. Arechavaleta in Gram. urug. p. 307 n* 1 (1894). Lámina n* xL. con análisis, Speg. Fl. vent. p. 70 n* 323; Fl, Tandil p. 54 n* 340; Noy. Add. El. pat. in An. Mus. Nac. B.-A. t. vir. 193, n” 686. 1192 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Syn: Danthonia tandilensis OK., Rev. 111?, 349 seg. F. Kurtz in Collect. ad Fl. arg. p. 33; St. n* 19,739 (31. x1r. 1908) Estancia Sta. Rita, por Vela F. C. $,, Prov. B.-A. (M. B.). Grama de terrenos áridos y pedregosos con rizomas nodosos pluricaules. Cañas derechas de 20-40 cm. de alto, lampiñas. Lámi- nas angostas, puntiagudas y enrolladas. Panojas erectas pauci- espigadas. Espiguillas lanceoladas ó sublanceoladas de 6-7 flores. Paja seca, forraje de insignificante valor; floreciendo desde No- viembre 4 Diciembre. En la R. A. sólo observado en la parte Oeste de la Provincia de B.-A. (Urug., Bras. austr.). var. melanathera HackeL nov. var. Differt a typo arista in *], inferiore nigra v. atro-violacea gyris 1-2 ase remotis laxe torta, gluma fertilis dorso pilis parcis adspersa, pauciflora. (El Dr. Hackel titubeaba, si iba á formar una nueva especie de esta planta, pareciéndole luego, sin embargo, demasiado insignifi- cantes las diferencias, para elevarla á especie propia, cotejando ambas plantas á la par, se apercibe fácilmente la divergencia notable que existe entre típica y variedad). St. n* 16,810 (12. 1. 1907) Capilla del Monte, Dep. Punilla, Prov. Córdoba á 1,200 m. de altitud. (M. E.). 224. (205b) Danthonia Hieronymi (OK.) Hackez. ?. St. n* 18,859 ex Lillo nv 7,963 (20. xt. 2907) Barrancas escarpa- das por La Banda, Tafí, Tuc. 4 3,000 m. alt. St. n* 21,059 (20. xr. 1909) Quebrada de Manzano, Estancia Pampa de San Luis, Sierra de Achala. Dep. Cruz del Eje, C. 4 2,000 m. alt. (1) En la Contrib. 11. p. 486, en la nota al pie, dijimos refiriéndonos al nombre de «Lamprothyrsus» Pilger, que provenía de dos palabras latinas, que significa- ban—relumbroso y tirso—lo que confieso ser un lapsus calama, pues son palabras derivadas del griego. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 118 (209 b) var. jujuyensis OK. 225. Danthonia virescens Desv. Desv., in Gay, Flor chil. vi. 363. (1853); F. Phil. Cat. Fl. chil. p. 321; St. n* 17,974 (26. 11. 1901) Rio Corcovado, Chubut, Patagonia (NL a? 50). Planta débil de cañas erguidas de 30-40 cm. de altura, nudos cor- tos y obscuros; las vainas foliares y las hojas son de un verde claro y se presentan enrolladas y lampiñas, su longitud apenas alcanza por mitad á la de las cañas. La lígula es vellosa y la panoja estre- cha y mide unos 5 cm. de largo. No se produce en cantidad suficiente para poder apreciar su valor forrajero. La citamos por primera vezcomo habitante de la R. A., habien- do sido mencionada y descrita antes como de Chile, X. CHLORIDEAE. MICROCHLOA R. Brown. 226. (121 a, Syn.) Microchloa indica (Lrx. f.) O. Krzx. O. Ktze. Rev. Gen. pl. 111?, 356 (1898). Syn: M. indica (Lin. f.) Hackel, Ex herb. hassl. Nov. paraguar. Fedde, Repert. vir. (1909) p. 373 n* 55, (121 a, 210 b) Syn: M. setacea (L. f.) R. Brown, l. c. St. n* 17,774 ex Lillo n* 5,695 (9. 11. 1907) Campos Secos, Tafí, Tucumán á 2,100 m. de altitud. St. n* 18,742 (16. 1v. 1908) ) Estancia Santa Rita, Estación Vela, a O REO 08) E: CS. Proy BA. (MB... var. tenuis HackeL et STUCKERT NOV. Var. Differt a typo culmo gracillimo ex omnibus nodis ramosa foliis brevissimis, spica tenuiore recta vel levissime incurva. St. n” 21,598 (20, 111. 1910) Cañada Alegre, Dep. Burruyacu, Luc 6-): AxaL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xiv. Marzo 20, 1911. 8 114 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. CYNODON L. C. Rich. 227. (122a, 211b) Cynodon Dactylon (L.) Pers. St. n* 17,070 (3. 11. 1907) La Diana, S. Martin, Rioja. » » 17,611 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 18,152 (16. 1v. 1908) Quebrada de Chelco, Rioja (F. S.). » » 19,310 (15. x1. 1908) San Vicente, Córdoba. » » 19,808 ex Lillo n* 6,877 (10. v. 1902) B.-A. » » 20,091 (6. 1v. 1909) Rio IV, Córdoba. SPARTINA SCHREB. 228. Spartina ciliata KuwsrH. Kunth, Rev. gram. 1. 94; J. Ball, Fl. patag. 1. p. 236; Arech. Gram. urug. p. 320 n” 3; Macloskie, Exp. patag. p. 208. Syn: Spartina coarctata Trin. in Act. Petrop. (1845) p. 110. » : «Solenachne phalaroides» Steud. Synops. 10. St. n” 17,487 (15. 11. 1907) Estancia «El Espinillo», sierras cerca del mar en la proximidad de la estación Coronel Vidal (F. C. $S.), Prov. B.-A. (M. E.). Pasto duro, casi exclusivamente de médanos ó arenales, en los que se entierran los rizomas en bastante profundidad. Cañas sim- ples cilíndricas y lisas de S0-150 cm. de altura. Las hojas son es- trechas convoluto-filiformes. La panoja es espiciforme y casi cilíndrica de 20-30 em. de largo por 1-1,5 cm. de diámetro, apare- ciendo completamente lisa y lustrosa por fuera. Las espiguillas. biseriadas son aprensadas oblicuamente entre sí y tupidamente empizarradas. Las quillas de las glumas son pestañosas. Inadecua- das para forraje, pero dicese ser empleadas para techar ranchos. En la R. A. sólo fué indicada como de la proximidad del Atlán- tico, costa de la Provincia B.-A. (Urug., Bras. austral). 229. (212 b) Spartina montevidensis ArrcH. CHLORIS Sw. 230. (123 a, 213 b) Chloris ciliata Sw. St. n” 16,690 (29, x11. 1906) Los Cocos, Punilla, C. » » 17,604 (30, 1v. 1907) Huillapima, Catamarca (M. E.). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. St. n* 18,289 (18. x11. 1907) Marcos Juárez, C. » 19,055 (15. vr. 1907) Colonia M. Belén, Chaco (H. M.). » » 19,809 ex Lillo n* 6,020 (1. 1907) Rioja. » » 19,993 (31. 111. 1909) Dal. Vélez, C. (214 b) forma breviseta Hacker. 231. (124 a, 215 b) Chloris distichophylla Laa. genuina HAckEL. St. n* 18,296 (18. x11. 1907) Marcos Juárez, C. » 18,517 (29. 1. 1908) Sierra Chica, C. a IO IS 101-1909) 0, forma inter genuina el var. argentina. St. n* 19,810 ex Lillo n” 6,668 (15. xr. 1903) Mocovi, S.-Fe. (125 a, 216 b) var. argentina HackeL. St. n* 20,105 (15. 1v, 1909) Cercanías de Córdoba. » 21,101 (rv. 1910) Est. Pampa S. Luis, Achala, C. á 2,000 m. > altitud. 232. (126 a, 217 b) Chloris polydactyla Sw. Hassler, Fl. pilc. 1. 24. St. n* 21,498 (10. 11. 1910) Estancia San Teodoro, Rio 1, C. (218 b) et var. breviaristata HackEL. forma pauciradiata E. Kurtz. St. n* 17,959 (15. xr. 1907) Cercanías de Córdoba. » 18,340 (18. x11. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R,. A.). » 116 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 233. (127 a, 219 b) Chloris radiata Sw. St. n* 18,733 (16. 1v. 1908) Córdoba. » » 19,811 ex Lillo n* 5,692 (12. 11. 1907) Tafí, Tuc. (220 b) var. beyrichiana (Kru.; HackEL. St. n* 20,020-79 (3. 1v. 1909) Mol. Gamez, Rio IV, C. 234. (128 a, 221 b) Chloris virgata SwArtz. St. n* 17,262 (3. 111. 1907) La Diana, S. Martin, Rioja. » » 17,623 (10. v. 1907) Quebrada de Zapata, cerca de Belén, Cat. (M. E.). 235. (222 b) Chloris sp. an? nova. TRICHLORIS Four. 236. (129 a, 223 b) Trichloris mendozina (R. A. Pair.) Kur Tz. Hassler, El. pilc. 1. 34. Syn: Trichloris verticillata Fourn., Vasey, Grasses of the South- west of Northamerica (1591) planch. xxv.-Texas, Arizona, México. St. n” 19,917 (10. 111. 1909) Córdoba, Form. 237. (130 a, 224 b) Trichloris pluriflora-Fourxirr. St. n? 17,196 (12. 111. 1907) La Diana, S. Martin, Rioja. » » 17,495 a (15. 11. 1907) Coronel Vidal, F. C. S., B.-A. (M. E.). » » 17,605 (30. 1v. 1907) Huillapima, Catam. (M. E.). » » 17,719 (v. 1907) Estancia San Teodoro, Rio 1, C. » 18,865 ex Lillo n* 6,007 (1. 1907) Rioja. forma macra HackeEn. Trichloris sp. (incompleto). St. n* 19,812 ex Tillo 1? 4,740 (1. 1906) Rioja. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. ER GYMNOPOGON P. BrEaAUv. 238. (ízymnopogon muticus HackeL nov. spec. nomen ad inter. — St. n* 20,282 (2. 1x. 1909) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). Ejemplar único, de inflorescencia empobrecida y que se distin- gue por sus espiguillas exaristadas, pero su estado es incompleto y por consiguiente, si se hiciese una descripción, ella quedaría insegura. 239. Gymnopogon spicatus (Spr.) OK. O. Kuntze, Rev. gen. pl. 11”, 354 (1898). Syn: Polypogon spicatus Spr. 1. c. (182 a) Syn: Gymnopogon laevis Nees, 1. c. et in Stuckert, Contr. 1. 117 n* 132. var. brevisetus HAckEL nov. var. Differt a typo glumis sterilibus fertilique latius lanceolatis gla- bris, gluma 1. quam ní parum longiore, seta floris % ipse gluma haud duplo longiore (cir. 6 mm. long.) flere tabescente ad setulam minutam redacto. St. n* 18,744 (16. 1v. 1908) Estancia Santa Rita, por Vela, Prov. B.- A, (M. B.). var. pluriflorus DorLz. Doell in Mart. € Eichl., Fl. bras. 11. 3 p. 81 (1880). Syn: Gymnopogon biflorus Pilger in Engl. bot. Jahrb. xxx. 139 (1901) in Beitrag zur Flora von Mattogrosso. Syn: Gymnopogon laevis Nees. var. longearistatus St. (non OK.). Stuckert, in Contrib. 11. p. 490 n* 226. - E. C. (Bras.). 118 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. SCHEDONNARDUS STEUD. 240. (133 a, 227b) Sehedonnardus paniculatus (Nurr.) Trez. St. n” 19,422 (10. x11. 1908) 5 km. rio arriba de Río IV, Córdoba. » » 20,057 (5. 1v. 1909) Carnerillo, Río IV, C. (abundante). » » 20,996 (23. xtr. 1909) Tanti, Punilla, C. 241. Schedonnardus? nov. spec. ? St. n* 19,479 (18. xu. 1908) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). Es una gran lástima, que esta curiosa planta, perteneciente seguramente á una nueva especie, la que tal vez represente á un nuevo género, no haya podido ser coleccionada en ejemplares flo- ridos en estado de completo desarrollo. Entre tanto, únicamente puede colocársela en el género Schedon- nardus, siendo al cual ella se asemeja en las partículas florales, pero no en su inflorescencia, mas no se puede reconocerla, sin destruir el ejemplar. Es de desear que el colector la encuentre nuevamente y que lo sea en un estado más desarrollado. Lo que parece como tubérculos, son yemas de innovaciones. BOUTELOUA Las. 242. (134a, 225 b) Bouteloua aristidoides (H. B. K.) Gras. genuina. St. n” 17,076 /3. 111. 1907) La Diana, Dep. S. Martin, Rioja. » » 18,848 ex Lillo n” 7,934 (25. 11. 1908) Vipos, Trancas, Tuc. » » 20,114 (20. 1v. 1909) Cañada Alegre, Burruyacu, Tuc. (S. +). forma vaginis latioribus St. nov. forma. El ensanchamiento de las vainas proviene por una parte por ser asentadas las inflorescencias en sus axilas y por la otra de la decre- pitud del ejemplar en cuyo estado feneciente, aquéllas se volvie- ron más planas. Este carácter no me parece suficiente para esta- blecer una variedad aparte. — Hackel. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 119 St. n* 20,114a (20. 1v. 1909) Cañada Alegre, Burruyacu, Tue. (8. E.). 243. (135 a, 229 b) Bouteloua curtipendula (Micnx.) Torrry. St. n* 17,775 ex Lillo n* 5,448 (23. 1. 1907) Cuesta de las Juntas, Dep. Tafí, Tuc. St. n” 18,399 (1. 1. 1908) Los Cocos, Punilla, Córdoba. » » 20,051 (5.1v. 1909) Carnerillo, Dep. Rio IV, Córdoba. 244. (136 a, 230 b) Bouteloua lophostachya Gris. St. n* 17,084 (3. 11. 1907) La Diana, San Martin, Rioja. Extremadamente abundante y social; considerándose esta espe- cie como persistente en invierno y proporciona en esta época un excelente engorde para el ganado. 245. (137 a, 231 b) Bouleloua multiseta Gris. St. n” 16,117 (2. xr. 1906) Ochoa, Dep. Santa Maria, Córdoba. » » 17,116 (3. x11. 1906) ex Lillo n*5,300, Burruyacu, Tucumán. (232 b) var. pallida Hacker. 246. (233 b) Bouteloua simplex Lac. St. n* 17,700 (1. 1907) Capilla del Monte, Punilla, Córdoba. 247. Bouteloua vestita (5. Wars.) SCRIBN. L. - Scribn. Contrib. U. S. Nat. Herb. 11. 531 (1894) et Beal Amer. grass. 1 220. fig. 202 /1898) et 11. p. 419 (1896). Syn: Bouteloua polystachya (Benth.) Torr. Pac. R. R. Rept. 1v5 p. 336, t. 10 (1547) ex Chondrosium polystachyum Benth. Bot. voy. Sulph. 56 (1841) var. vestita S. Wats. Proc. Am. acad. xvm. p. 177 (1883) et circular n* 32. U.S. Dep. Agric. (1901). N. v. Hairy-grama, Grama de cabellos. (Texas). St. n* 17,502 (21. v. 1907) Estancia La Diana, Dep. San Martin, por Tello F. C. Arg. del Norte, Prov. Rioja. Grama aparentemente anual, amacollada ó difusa con cañas 120 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. erectas delgadas 6 ascendentes de 20-60 cm. de altura. Vainas fo- liares pestañosas en su garganta. Ligula muy corta. Las cañas aparecen envueltas en las hojas, antes de aplanarse y ellas osten- tan una punta cerdosa, siendo su largo de 2,5 cm., pero las de las ramas estériles son más cortas. Cada caña presenta de 24 8 espi- guillas encorvadas ascendentes, uniseriadas, multifloras, algo pilo- sas, de un largo que varia desde 1,5-2,5 cm. La gluma primera es hialina, con punta cerdosa de 2-2,5 mm. de largo, la segunda es linear, de alrededor de 3 mm. de largo, con dos dientes, pubescen- te en la carena, la vaina foliar es de 1-2 mm. de largo. La gluma fértil es pubescente en el lomo, oval, de 2,5-3 mm. de largo, bilo- bada, las vainas foliares laterales y centrales alcanzan á la misma altura de 1-2 mm.; sobrepasando el largo de la gluma. La palea es desde linear á oval, de 2,2-3 mm. de largo con cuatro dientes y dos vainas cortas, el rudimento pedicelado produce tres cerdas iguales de un largo de próximamente 2,5 mm. La planta prefiere terreno arenoso-arcilloso. No se produce en cantidad suficiente, para apreciar su valor forrajero, pero parece apropiado para cabrunos y lanares. En la R. A. florece de Marzo á Abril. La citamos por primera vez como habitante de la América del Sur, inclusive la R. A., siendo oriundac omo de la América boreal, desde el Poniente de Texas hasta el Sur de Arizona (México). ELEUSINE GAERrnN. 248. (138a, 234 b) Eleusine indica (L.) GAERTN. St. n” 18,506 (28. 1. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). 49.(139 a, 235 b) Eleusine tristachya KuntH. St. n* 17,409 (6. n. 1907) Estancia «El Morro», Quequén, B.-A. (M. E.). St. n*? 20,006 (1.1v. 1909) Rio IV, C. » » 20,415 (15, xt. 1909) Villa García, Tanti, C. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 2 DACTYLOCTENIUM WiLp. 250. (236 b) Dactyloctenium acgyptium (L.) K. Ricurer St. no 17,013 (3. nx. 1907) La Diana, San Martín, Rioja. LEPTOCHLOA P. BEauv. 251. (237 b) Leptochloa mucronata Kuntrh. St n* 20,003 (1. 1v. 1909) Rio IV, Córdoba. El ejemplar de 30 cm. de altura, representa una forma «humi- lior» de la especie, probablemente debido al lugar de su creci- miento. Citamos por primera vez la especie de la Prov. Córdoba. 252. (140a, 238b) Leptochloa virgáata (L., Brauv. Hassler, Fl. pilc. 1, 34. N. v. Nandú-capihi (Chaco). St. n? 17,449 (18. 1v. 1907) Catamarca (M. E.). » » 17,683 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A..). » » 18,798 (28. 1v. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). » » 19,147 (30. vrir. 1908) Colonia M. Belén, Chaco (H. M.). » » 19,813 ex Lillo n” 8,426 (21. vr. 1908) Tuc. AGS (20. 1 1910) Burruyacu, Tuc. (S. G.). XI. FESTUCEAE. PAPPOPHORUM ScHRrEB. 253. (14la, 239 b) Pappophorum alopecuroideum Vabhl, yenuinum. Hassler, Flor. pilc. 1. 34; Syn: Pappophorum saccharoides Gris. Symb. p. 301, n” 1,920 (pro minima parte). 11242 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. N. v. Capii moroti (Ch.), Cola de gato (Ch.). St. ne 17,122 (12. 111. 1907) Est. La Diana, vía Tello, Rioja. » » 17,651-66 (2. vu. 1901) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 17,196 ex Lillo n* 5,193 (8.11. 1907) barrancas pedregosas, Tafi del Valle Dep. Tafí, Prov. Tuc. á 2,000 m. alt. St. n” 18,311 (18. xn. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). 18,613 (8. 11. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). 18,802 (28. 106 1908) > » » 7 19,514 ex Lillo n* 4,465 (20. v.1905) Metán, Salta.—Form. >» Y Y Y Y Y 142 a, 240 b) forma caerulescens Sr. St. no 18,704 (16. 1v. 1908) Estancia San Teodoro, Rio 1, C. 254. (143 a, 241 b) Pappophoruma mucronulatum Nees. typicum. St. n” 17,078-S1 (3. 11. 1907) La Diana, Dep. San Martín, Rioja, frecuentisimo en las chacras. St. n” 17,797 ex Lillo n* 4,853 (18. 11 1906) Tapia, Dep. Trancas, Prov. Tuc. á 600 m. alt. St. n” 18,753 (16. 1v. 1908) Chelco, Rioja (F. S.). » » 20,052 (5. 1v. 1909) Carnerillo, Río IV, C. » » 20,535 (16. x11. 1909) Villa García, Tanti, C. » » 21,591 (20. 11. 1910) Burruyacu, Tuc. (S. G.). (144 a, 242 b) forma elatior Sr. Syn: Pappophorum saccharoides Gris. 1. c. (pro maxima parte). St. no 18,472 (17. 1. 1908) Córdoba. La institución del Pappophorum saccharoides como una nueva especie por Grisebach, fué un desacierto, pues las muestras en su minoría corresponden, cuando más, á formas robustas del P. alope- curoideum Vahl, mientras que por su mayor parte pertenecen á formas crecidas del P. mucronulatum Nees. Pero, es el caso, que el desarrollo de ambas especies queda sujeto á mucha variabilidad, produciéndose en ambas, principalmente en la última, individuos de diferentes alturas desde 20 cm.-2 m. con multitudes de transi- ciones, tanto en su colorido, como también en la disposición más ó menos floja de sus panojas y el tamaño y la forma de sus espigui- STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 123 llas, no autorizando estas diferencias el mantenimiento del P. sac- charoides Gris., como especie. Parece que Grrisebach é Hieronymus entendieron por P. alope- curoideum otra especie distinta á la de Vahl, sino no hubieran podido citar como sinónima de ella, el P. vaginatum Phil., él que con toda reguridad pertenece al P. mucronulatum Nees. Es por otra parte por demás extraño, que Gris. no mencionó en su Symb. esta última especie, que es la más divulgada, presentándose en millones de ejemplares y en ciertos parajes como vegetación predo- minante y hasta exclusiva. forma intermedia HackeL nov. forma inter typ. et var. vaginat. (Phil) Hackel. St. n* 17,259 (12. nr. 1907) La Diana, San Martin, Rioja. (243 b) forma pumila HackeL (244 b> forma spiculis minoribus HackeEL (245 b) var. subsimplex HackeL var. vaginatum (PuiL.) HackeL Syn: Pappophorum vaginatum Phil. Sert. mend. 11. p. 206 n* 241. (non P. vaginatum Buckl.). Syr: Pappophorum alopecuroideum Hieron. Pl. diaph. p. 299. pro parte (non Vahl). Syn: Pappophorum pappiferum (Lam.) OK. var. mucronulatum (Nees) OK. Rev. 11?, 365. pp. St. n* 17,086 (3. nr. 1907) Estancia La Diana, Dep. S. Martin, >» 17,216 (12 m. 1907)! Rioja. » » 18,154 (16. 1v. 1908) Quebrada de Chelco, Rioja (F. S.). Grama propia de terreno árido y arcilloso, cañas derechas de unos 50-80 cm. de altura, hojas lineares un tanto tiesas, panoja espiciforme laxa, envainada. Forraje duro. Planta descrita como nueva especie de Mendoza y ahora obser- vada en la Rioja. 124 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. COTTEA 1 KuNTH. 255. Cottea pappophoroides KuxrH. Kunth, Rev. gram. 1. 84, 281, t. 52 (1830); Enum. 1. (1833) 256; Suppl. 1. (1835) 200; OK. Rev. nr?. 349; F. Kurtz, Mem. facult. Cienc. exact. Córd. (895) 31; Collect. Fl. arg. 37. St. n* 17,111-116 (12. mí. 1907) Cerro de Minas, Sierra de Ula- pes, Dep. San Martin, Prov. Rioja á 1,200 m. alt. St. n* 17,503 (21. v. 1907) Quebrada de Chelco, Rioja (F. $S.). » » 17,624 (10. v. 1907) Quebrada de Zapata, cerca de Belén, Prov. Catamarca (M. E.). St. n” 18,747 (16. 1v. 1908) Ambil, Rioja (F. S.). » » 21,626 (1. 1v. 1910) Casa Bamba, Sierra Chica de Córdoba, en sociedad de ejemplares de Peperomia blanda H. B. K. y de Pe- peromia Stuckertii C.D.C., primeras Piperáceas observadas en la Prov. de Córdoba. Hermosa grama de terreno arcilloso ó pedregoso. Raiz lenosa intrincada con cañas de una altura de 50-80 cm., hojas numerosas, angostas. Panoja abierta y desplegada, espiguillas cabisbajas de flores aristadas. Proporciona regular sustento á la hacienda. Su área geográfica es Mend., SL, C., R., Ct., Tuc. (Bras., Perú, México, Arizona, Texas). MONANTHOCHLOE ENGELM. 256. Monanthoechloé littoralis ExceLm. - Engelmann, Transact. Acad. sci. St, Lonis 1. (1859) p. 436; tabl. xr. xIiv; Hackel, in Engl. € Prantl. natirl. Pflanzenfam. u. 2. (1887) p. 65; F. Kurtz, Sert. Córd. p. 22 n* 53, Syn: Halochloa acerosa Gris. Symb. p. 285 n* 1,519; Hieron. Pl, diaph. p. 308. St. n* 10,865 a ex F. Kurtz n” 6,476 (13. 1, 1889) entre San José y Totoralejos, Dep. Sobremonte, Prov. Córd. 1 OK. Rey. escribe; Cottaea. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 125 St n* 18,865 b ex F. Kurtz n” 12,760 (v. 1904) Chamical, Rioja (Dr. G. Bodenbender) recibidos así determinados. N. v. Pasto de guanaco. Grama rastrera de terrenos salinos, de cañas duras, leñosas, extendidas á menudo horizontalmente, formando estolones, que se intrincan entre sí, tal como lazos, obstaculizando la marcha del caminante. Las hojas, enrolladas en sí, son bastante conglomera- das y de consistencia dura, de forma corta y angosta, en su extre- midad son munidas de una púa aguda. Las espiguillas minutas se encuentran escondidas, de tal manera que pocas veces se aper- ciben. Es planta muy social y cubre á veces trechos de muchos kiló- metros cuadrados, pero es absolutamente inadecuada para forraje. De la R. A. se la conoce de C., Ct. y Rioja, produciéndose igual- mente en los Estados Unidos de Norte América, en California y México. MUNROA TorREY 257. (145a, 245 b) Munroa benthamiana HackeEL. St. n* 15,133 (x. 1905) Sierra Chica, Córdoba. » » 17,037 (3. mL. 1907) La Diana, San Martín, Rioja. 258. (247 b) Munroa squarrosa Torrey. CORTADERIA STAPF. 259. (245b) Cortaderia dioica (SpreNG.) SPEG. Hassler, El. pilc. 1. 35; sub Gynerio argent. Nees. St. n? 17,647 (2. vir. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 18,948 (23. vr. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). » »20,061 (5. 1v. 1909) Carnerillo, Río IV, C-Form. El Prof. Fitschy encontró en 1906 en esta especie tan común, ácido cianhídrico, y en 1909 el Dr. M. Greshoff, Director del museo colonial de Haarlem, en sus nuevos análisis, ha podido confirmar este hecho. 126 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. (Royal Botanic Gardens Kew. Bull. of Miscellaneous Informa- tion (1909) p. 406.). 260. Cortaderia pilosa (D'Urv.) Hackez. Hackel in Nordenskjóld Svensk. Exped. til Magellandl. 111. n* 5, (1900) p. 222; F. Kurtz, Revista, Mus. La Plata vi. (1896) 396 et Collect. Fl. arg.in Bol. Ac. Nac.cienc. Córdoba, t. xvI. p. 253 (1900); Speg. Nov. add. Fl. pat. in An. Mus. Nac. B.-A. t, vir. 194. n* 691 (1901). Syn: Arundo pilosa D'Urville, Flor. Malouines p. 33 (1825); Franchet, Mis. Cap. Horn, Phanerog. (1889); Alboff, Terrefeu 11. p. 44, n? 202; Flor. rais. Terrefeu x1r. n* 4/2; F. Kurtz, Rev. Mu- seo de la Plata vir (1896), p. 396; A. Rendle, Hesketh Prichards patag. Plants p. 323. Syn: Ampelodesmos australis Brongn. in Duperron Voyage, Co- quille 31 tab. vi; Kunth, Enum. 1. 247, 1. 192, Syn: Ampelodesmos egmontiana Roem « Schult. Syst. 1. 511. » Gynerium pilosum (D'Urv.) Macloskie, Exp. pat. p. 213 a/a St, n* 17,988 (1. 11. 1901) Rio Corcovado, Chubut (N. 1. n* 91). Cortadera cuyas cañas llegan á una altura de 40-50 cm. y á ve- ces bastante más. Las hojas algo pilosas, estriadas, disticas y un tanto convolutadas, traspasan á menudo el alto de las cañas. La raquis es vellosa y la panoja de forma subaovada, es contraída. Inadecuada para forraje. Fué citada como de las islas Malvinas, de la Tierra del Fuego y de la Patagonia austral. 261. (146 a, 249 b) Cortaderia rudiuscula Srapr. ARUNDO L. 262. (147a, 250b) Arundo Donax L. Hassl. Fl. pilc. 1. 35. St. n* 17,214 (12. 11. 1907) La Diana, San Martín, Rioja.-Form. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. LA PHRAGMITES TriN. 263. (251b) Phragmites communis (L.) Prix. genuina. N. v. Caña-paja, Juj. St. n* 17,432 (16. 111. 1907) Estancia «La Sierra», Estación Torn- quist F. C. S., B.-A. (M. E.). St. n” 19,815 ex Lillo n” 4,958 (24. 1. 1906) Maimará, Jujuy. var. flavescens CusTER. Custer in Gaud. Fl. helvet. vr. 341 (1830). St. n* 18,182 (16. rv. 1908) Quebrada de Chelco, Rioja (F. $S.). Difiere de la genuina por el color amarillento-parduzco de sus espiguillas. Variedad nueva para la R. A., siendo común en Europa. TRIODIA R. Br, 264. Triodia Figueirai AreEcHAvALETA. Arech. Gram. urug. p. 348; M. B. Berro, Las Gram. de Vera (1906) p. 95, no 94; Hassler, El. pilc. 1. 35. N. v. Cola de tatú (Chaco.. St. n* 17,652 (12. vu. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 18,704 (16. 1v. 1905) Laguna del Monte, Dep. Marcos Juá- rez, Sur de la Prov. Córd. y limitrofe con la de B.-A. (M. E.). St. n* 18,951 (23. vr. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). Especie de terrenos húmedos y bajos, que florece desde No- viembre á Marzo. Forma densas matas entre las que se elevan sus cañas de 50-100 cm. Las panojas espiciformes presentan un hermoso aspecto, tanto por la forma de su inflorescencia y la densidad de ella, como tam- bién por su reluciente coloración rojiza hasta morada; sus láminas son amplias, largas y puntiagudas y su lígula corta y pestañosa. Esta grama haría un lindo efecto, como planta de adorno y es de fácil propagación; siendo además de consistencia blanda; viene á ser muy adecuada como forrajera. Hasta ahora sólo era conocida de E.-R. y del Uruguay y hoy por primera vez la citamos de la Provincia de Córdoba, del Cha- co y Form. 128 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 265. (149a, 252 b) Triodia paraguayensis (OK.) HackEL. St. n* 17,077 (3. 111. 1907) La Diana, San Martin, Rioja. 266. Triodia pilosa (Buckz.) Ermer D. Mertun. Elmer D. Merill in Circular n* 32 (1901) of the Unit. St. Dep. of Agriculture, Divis. Agrostol. (some Arizona grasses) p. 9; B. F. Bush in Transact. Acad. St. Louis xtr. 61 (1902). Syn: Uralepis (Tricuspis) pilosa Buckl. Proc. Acad. Nat. sci. Philad, 1862 p. 94 (1863). Syn: Tricuspis acuminata Munro ex A. Gray in Proc. 1. c. (1862) p. 233—nomen solum. Syn: Sieglingia acuminata OK. Rev. 11. (1891) 189. (148 a, 252 b) Syn: Triodia acuminata (Munro) Vasey grass. of the S. W. Ind. (1891) pl. xxxir.; F. Kurtz, in Bol. Acad. Nac. cienc. Córdoba t. xv. (1897) p. 251; Stuckert in Gram. arg. 1. ex An. Mus. Nac. B.-A. (1906) p. 497. Syn: Triodia avenacea F. Kurtz (non H. B. K.) et var. longea- ristata F. K., Rev. Mus. La Plata v. (1893) p. 299. Syn: Sieglingia argentina OK. Rev. 11?, 361 (1898). » » pilosa (Buckl.) Nash in Britt. € Br. Hlustr. Fl. ne. 504 (1898). St n” 16,689 (29. x11. 1901) Los Cocos, Punilla, C. » » 18,885 ex Lillo n* 7,959 (1. 1908) Tafi, Tuc. » >» 20,407 (15. xi. 1909) Santa María, F.C. Arg. del Norte, Sierra Chica de €. Triodiía sp. an ? nova. St. n” 16,259 (26. xr. 1906) Colonia Benites, Chaco. (N. R. A.). Demasiado exiguo para determinarlo, DIPLACHNE P. Berauv. 267. (254b) Diplachne carinata (Gris.) HackeL *. St. no 17,729 ex Lillo, Venturi n” 136 (2. v. 1902) Barracas al Sur, B.-A. * Especie apenas distinguible de la Diplachne fusca (L.) Beauv. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 129 268. (255b) Diplachne ehloridiformis Hacken. Hassler, Fl. pilc. 1. 35. C.-Form. 269. (150 a, 256b) Diplachne dubiía (H. B. K.) Scribx. St. n* 17,257 (18, 111. 1907) Los Cocos, Punilla, C. » » 18,788 (16. 1v. 1908) Chelco, Rioja. » » 18,814 ex Lillo n” 6,005 (1. 1907) Rioja. » » 18,319 > » » 6,025 (e 1907) Rioja. AISSSiO > =>»: (601 (8.11. 1908) La Banda, Tafi, Tuc. á 2,000 m. alt. 270. Diplachne fascicularis (Lam.) P. Beauv. P. Beauv. Agrost. 80 et 160 (1812) Atlas, p. 11, pl. xvr. fig. 9. Syn: Festuca fascicularis Lam. Tab]. Encyel. 1. 189. (1791). » Leptochloa fascicularis (Lam.) A. Gray, Man. Bot. 583. (1848). St. n* 17,658 (2. vu. 1907) Colonia Benites, Chaco (N.R. A.). Dificultamos que la planta que citó Grisebach en Symb. no 1940 con el nombre de Leptochloa f. A. Gray, pertenezca á esta especie, sino como indicábamos antes á la D. fusca (L.) Beauv. Grama de cañas fasciculadas, lisas, de una altura desde 30 á 100 cm., ora derechas, ora recostadas; hojas estrechas generalmente involutadas de 10 á 30 cm. de largo por 3 á 5 mm. de ancho. Panoja bastante contraida, las espiguillas en número de 6 á 12 miden de 7 4 12 mm. Planta de terreno húmedo, forraje mediocre. Exceptuando la indicación de Grisebach, que es dudosa, proce- diendo en tal caso la planta de Tucumán, citamos esta especie por primera vez de la R. A. y con especialidad del Chaco. Ella es mencionada del Paraguay, de la América cálida y sobre todo de muchos puntos de la América septentrional. 271. (151 a, 257 b) Diplachne fusca (L.) Beauv. Hassler, El. pilc. 1. 35; St. n* 16,271 (26. xr. 1906) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 17072 (3. 111. 1907) La Diana, San Martin, Rioja. Ana. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. x1v. Marzo 27, 1911. 9 130 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n* 17,317 (9. 1v. 1907) Estancia San Teodoro, Rio 1, C. » » 18,612 (20. v. 1907) Chacarita, Catam. (M. E.). » » 18,748-55-87 (16. 1v. 1908) Quebradas de Chelco y Ambil, ¡Rioja (5.8). St. n” 18,820 ex Lillo n* 6,031 (1. 1907) Rioja. » » 19,485 (18. x11. 1908) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 19,816 ex Lillo n” 6,398 (2. v. 1902) B.-A. » » 20,087 (6. 1v. 1909) Rio IV, C.-Ch.-Form. Nora. Las glumas de los ejemplares del n” 18,787 se encontra- ban infectadas por un hongo, que les había provocado un creci- miento monstruoso”. var. maecrotricha HackeL nov. var. Differt a typo glumis fertilibus a basi ad ?/¿ marginum longius et densius villosulis, etiam in */, inferiore carinae parce pilo- sulis. St. n” 19,331 (30. x1. 1908) Colonia Marg. Belén, Chaco (H. M.). 272. (152 a, 258 b) Diplachne Jatifolia (Gr1s.) HackEL. Hassler, Fl. pilc. 1. 35. St. n* 18,785 (16, 1v. 1908) abundante en la quebrada de Chelco, Rioja (F. $.). St. n” 19,817 ex Lillo n* 3,179 (24. v. 1903) cercos de Tucumán. 273. Diplachne mendocina (R. A. PurL., F. Kurrz. F. Kurtz in Bol. Acad. Nac. cienc. Córdoba, t. xv. (1897) 521; et in t. xvi, et in Collectan. ad Flor. arg. (1900) 260. Syn: Ipnum mendocinum KR. A. Phil. in Sert. mend. 11. ex Anal, Univ. Chil. xxxv1. (1870) p. 211 n* 252; Hieron. Plant. diaph. p. 304. Syn: Diplachne mendocina (Phil) OK. Rev. 11”, (1898) p. 349. » » » (Phil.) Macloskie, Exp. pat. p. 214 (1903-06.). * Compárese la nota en la especie Festuca Hieronymi Hackel. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 3 St. n* 16,814 (14. 1. 1907) Capilla del Monte, Punilla, C. (M. E.). » » 17,206 (12. 111. 1907) Estancia La Diana y Cerro de Minas, Sierra de Ulapes, Dep. San Martin, Prov. Rioja. Philippi da la siguiente descripción de ella: «Grama que forma céspedes. La raiz es fibrosa, las cañas llegan á una altura de 30 cm. (1 pie) y hasta más. Ellas muestran, como la mayor parte de las gramas, cuatro nudos, son escabras y cubier- tas de las vainas foliares casi hasta la inflorescencia. Las hojas son planas, lampiñas, escabras; su vaina es más lisa; en el lugar de la lígula existe de cada lado una barba de pelos; su lámina mide como 65 mm. (2 */, pulgadas) y se adelgaza paulatinamente desde su base. La panoja, ó más bien dicho, la espiga compuesta, es erguida, de un largo de casi 80 mm. (3 pulgadas) y se compone de cinco á slete espigas de un largo de más 4 menos 35 mm. (16 líneas), formando un ángulo muy abierto con el eje y llevan ocho, diez ó más espiguillas. La gluma superior tiene 3mm. (11/, línea) de largo; la palea exterior 4 mm. (2 lineas). Me ha parecido que las espiguillas de las flores tardías contenían con frecuencia sólo dos á tres flores.» Suministra buen forraje, principalmente para ovejas. La especie fué conocida hasta la fecha de Pat., Mend., B.-A., R., Ct., y ahora la citamos por primera vez de Córdoba. 274. (153 a, 259 b) Diplachne spicata (Nees.) DorLz. St. n* 17,205 (12. 11. 1907) La Diana, San Martín, Rioja. » » 17,783 ex Lillo n” 3,100 (9. 11. 1907) Campos Secos, Tafí del Valle, Dep. Tafí, Tuc. á 2,100 m. altitud. St. n* 20,406 a (16. x11. 1909) Villa García, Tanti, C. > » 21,599 (20. 11. 1910) Burruyacu, Tuc. (S. G.). Diplachne sp. an? nova St. n* 16,859 (12. 1. 1907) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). Material demasiado exiguo é incompleto, para atreverse á una determinación, 132 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. ERAGROSTIS Hosr. 275. (l54a, 260 b) Eragrostis atrovirens (Desr.) Trix. St. n* 14,044 (1. 1904) | > > I1SAL (9 11m 1907) ' » » 20,084 (6. 1v. 1909) Rio IV, C. » » 20,410-21,098 (16. x1r. 1909) Villa Garcia, Tanti, C. Estancia San Teodoro, Rio I, C. 276. (261 b) Eragrostis capillaris (L.) SteEUD. 277. Eragrostis hypnoides (Lam.) B. S. P. Britton, Stern et Poggenb. Prelim. Cat. N. York. pl. 69 (1888); OK. Rev. 11. 714 (1891); Hassler, Fl. pilc. 1. 35. Syn: Poa hypnoides Lam. 1Il. gen. 1. 385 (1191). » Poa reptans H. B. « Kth. (1815). » Eragrostis reptans Nees ab Es. Agrost. bras. p. 514 (1829); Niederl. Result. bot. Mis. p. 74; Bettfr. Herb. 1. p. 35 no 416; Arech. Gram. urug. p.3/8 n” 10; Berro, M. B., Gram. de Vera (1906) p. 100 n* 144. St. n* 16,301 (26. xr. 1906) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). St. n* 19,820 ex Lillo n* 3,150b (10. xr. 1907) Ocampo, Sta.-Fe. Planticula cespitosa, enana, multiflora. Cañitas de 5-10 cm., ge- neralmente recostadas horizontalmente en el suelo, con numero- sos estolones, emitiendo raices en sus internodios. Extendiéndose en amplia dirección viene á formar una alfombra densa de un ver- de claro. Prefiere terreno húmedo, arcilloso-arenoso y florece de Febrero á Marzo. Su inflorescencia es una panoja contraida de ramificaciones cortas. Espiguillas multifloras (10-30). Su consistencia es blanda y constituye un buen forraje para ovejas. Su área geográfica es B.-A., Sta.-Fe, Chaco, Form., Mis. (Urug., Bras., Guyana). 278. (263 b) Eragrostis interrupta (Lam.) DorLL. Hassler, Fl. pilc. 1. 36. 279. Eragrostis longipila Hacker nov. spec. Stuckert, Herb. arg. n? 17,090 (3. 111. 1907) Estancia La Diana, Dep. San Martín, Prov. Rioja. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 109 Perennis? Culmi erecti, sine panicula 10-15 cm. alta, teretes, glaberrimi, 3-4-nodi, nodis distantibus, infra nodos vix pro- minentes annulo glandulifero parum conspicuo v. in nodis inferioribus deficiente notati, simplices vel saepius e nodis superioribus florifero-ramosi. Vaginae arctae, internodiis breviores, praeter os longe barbatum glaberrimae. Ligula ciliaris, ciltis longis. Laminae anguste lineares, tenuissime acuminatae, planae v. siccando subconvolutae, inferiores 2-3 cm., superiores 10-12 cm. long., circ. 1,5 mm. latae, utrinque pilis patulis mollibus longiusculis (circ. 3-4 mm. longis) basi tuberculatis densins vel parcius vestitae, supra scabrae, infra marginibusque laeves, tenuinerves. Panicula elongata, lanceolato-oblonga, culmum longitudine su- perans (20-40 cm. long.), basi vagina summa involuta, patula, laxiuscula, rhachi ramisque scabris, his binis-senis pluribusve verticillatis, tenuifiliformibus, rectis, in axilla barbatis, pri- mariis inferioribus 10-15 cm. longis erecto-patulis, secundariis alternis plerumque iterum divisis erecto-patulis, spiculis secus ramos aequaliter dispositis terminalibus ramorum longissime, subterminalibus brevissime pedicellatis. Spiculae lineares v. lanceolato-lineares, bene evolutae circ. 9-flo- rae, 9-6 mm. longae, 1,5 mm. latae, floribus laxiusculis sese ad “| usque tegentibus, pallide virides, glabrae rhachilla tenaci. Glumae steriles subaequales (1,6 mm. long.), lanceolatae, acutae, l-nerves, carina scabrae; [. 111, “m subaequans, IL. IV. *, brevior. Glumae fertiles ovali-oblongae, obtusae, elevato-trinerves, dorso minutissime punctulatae, nervis viridibus in gluma albida valde distinctis scabrae, demum deciduae. Palea glumam aequans lineari-oblonga, obtusa, integra, carinis spinuloso-denticulata. Antherae ovali-oblongae minutae (0,3 mm. long.). Affinis E. lugente Vees, quae differt culmo eglanduloso, pani- cula culmo breviore ramis ramulisque patentissimis, gluma 1. ad medium 111. pertinente, glumis fertilibus lividis obscure trinervis. E. virescens Presl. differt a nostra culmo basi procumbente eglanduloso, foliis brevibus lanceolato-linearibus glabris, pa- 134 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. nicula ovata exserta culmo breviore ramis solitariis spiculis congestes etc. E. mexicana Link. differt praecipue spiculis ovatis v. ovato- oblongis. 280. (155 a, 254 b) Eragrostis lugens Ners. . n* 17,309 (111. 1907) La Falda, Punilla, C. » 19,201 (10. x. 1903) Formosa, Pilcomayo (C. M. H.). » 19,821 ex Lillo n* 6,562 (17. 1x. 1903) Mocovi, Sta.-Fe. » » 19,392 (10. xr. 1908) Río IV, C. y de otros números de la Prov. C. forma pallida HackeL nov. forma Differt spiculis flavescentibus. St. n” 20,053 (5. 1v. 1909) Carnerillo, F. C. And., Dep. Rio IV, C. subspec. flaccida (Lixom.) ZackeEL nov. nom. (262 b) Syn: Eragrostis flaccida Lindman l. c. St. n* 17,541 (vr. 1907) Córdoba. » » 19,818-19 ex Lillo n* 6,222-23 (rv. 1907) La Banda, San- tiago del Estero. St. n” 18,390 (1. 1. 1905) Los Cocos, Punilla, C. » 20,074 (4. 1v. 1909) Molino Gamez, Rio IV, C. » 20,110 (20. 1v. 1909) Estancia San Teodoro, Dep. Villa- » >» monte, Rio 1, C. St. n” 20,538 (16. xrt. 1909) Villa Garcia, Tanti, C. 281. (156 a, 266 b) Eragrostis megastachy a (Korr.) L1xk. St. n” 16,840 (17, 1. 1907) Río IV, C. y otros números, algunos muy bajos. 282. (265 b) Eragrostis mexicana (Lac.) LINK. St. n” 18,507 (1. 1. 1907) Los Cocos, Punilla, C. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 135 283. (157 a, 267 b) Eragrostis minor Host. var. 284. (2658 b) Eragrostis Neesii Trix. N. v. Pastillo violeta. St. n* 16,811 (14. 1. 1907) Capilla del Monte, Punilla, C. (M. E.). » » 19,145 (30. virr. 1908) Colonia Marg. Belén, Chaco (H. M.). » » 20,495 (16. x11. 1909) Villa Garcia, Tanti, Sta. María, C. » » 21,006 (23. x1r. 1908) entre Tanti y Durazno, Sta. María, C. 285. Eragrostis neomexicana Vaskvy. Vasey, Beal Grasses N. Amer. 11. 485 (1996); F. L. - Scribn. in Am. Grass. p. 258, fig. 240. Washingt. (1898-99). N. v. Chab-grass (Nueva Mexico). St. n” 16,118 (2. xr. 1906) Ochoa, Dep. Sta. María, Córdoba. » » 17,090* (8. 11. 1901) Cerro de Minas, Ulapes, Rioja 4 1,600 m. alt. St. n* 17,542 (1v. 1907) Cercanias de Córdoba. » » 18,151-571-59 (16. 1v. 1903) Ambil € Chelco, Rioja (F. 5.). Grama anual, difusa y erguida, bastante robusta y precoz, rami- ficándose desde cerca de su base. Las cañas alcanzan á una altura, que varia desde 50-120 cm. Las vainas foliares son lampiñas, bar- badas en sus aberturas. La ligula forma un anillo pestañoso. Las hojas son numerosas, angostas, aplanadas ó envueltas, algo ásperas de 15-30 cm. de largo por 2-6 m. de ancho. La panoja, de un color ligeramente parduzco, se presenta amplia y difusa, de una forma desde ovoidea hasta linear, de 15-40 cm. de largo, con sus rayos rigidos, casi siempre separados, desnudos en la quinta parte de su longitud y con numerosos ramitos apretados. Las espiguillas pediceladas son suavemente teñidas de rojizo, estiradas, estrechas y aplanchadas, su forma es linear ó linear- lanceolada, de 5-8-14 flores, cada una de 5-9 mm. de largo. Por el carácter de sus espiguillas se distingue principalmente de su congé- nere la E. mexicana (Lag.) Link. Las glumas estériles son delgadas, uninervadas la 1.*, 1-1,3 mm. de largo, 2.*, aovada-aguda, 1,5 mm. de largo; la gluma aplanada, delgada, oval, anchamente aovada ó deltóidea-oval, obtusa, ó estando extendida, como si fuese aguda- mente arrancada; todos los nervios son prominentes, de 1,5-1,7 mm. de largo; la palea es encurvada, y antes de extenderse, linear, obtu- 136 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. sa, pestañosa en las carenas, 1,3-1,5 mm. de largo. El grano es anchamente oval y ligeramente surcado de 0,1-1 mm. de largo. Pasto abundante y de excelente provecho como forraje. Florece de Diciembre á Marzo. La citamos por primera vez de la América del Sur, habiendo sido descrita como de Nueva Mexico, ó sea desde Texas á la parte Sur de California y Arizona, en donde se la encuentra hasta á una altitud de 1,500 m. 286. (269 b) Eragrostis nigricans (H. B. K.) Steup. 287. Eragrostis orthoclada Hacker. Hackel in Bull. Herb, Boiss. Ser. 11. t. 1v. p. 251 (1904) in Cho- dat € Hassler, Plant. hasslerianae 1. p. 371. St. n* 20,119 (20. 1v. 1909) Cañada Alegre, Dep. Burruyacu, Prov. Tuc. ($. G..). St. n* 21,593 (20. 111. 1910) de la misma localidad. Grama perenne, cespitosa con innovaciones extravaginales. Ca- ñas erectas, graciosas de 30-40 cm. de altura, tiesas, lampiñas, multinudas, los nudos cubiertos, sencillos ó á veces acompañados de ramitas estériles. Vainas tiesas, lampiñas, las superiores reves- tidas con escasos pelos, sobrepasando los entrenudos, ó 4 menudo pestañosas en el cuello. Lígulas cortísimas pestañosas. Láminas. subangostadas en la base, lineares, larga y suavemente acumina- das de 12 cm. de largo por 1-3 mm. de ancho, planas, algo rígidas, patentemente dísticas, verdes, con todas las márgenes más ó menos ásperas, provistas de nervios resaltantes, las que se encuentran aproximadas entre si. Panoja lanceolado-linear, relajada, de 20 em. de largo por 3-4 cm. de ancho, contraida, la raquis inferior lisa, la superior algo áspera. Las ramas son binarias ó terciarias, dis- puestas en ángulo corto, casi recto; las espiguillas en las ramas primarias son 4-6-arias, subiguales y cortamente pediceladas. Las glumas estériles son subiguales, lanceoladas, agudas; uni- nervadas; las fértiles son de igual largo y trinervadas, los nervios laterales más prominentes. Esta especie no se asemeja á ninguna otra del género entre las encontradas en la América austral, exis- tiendo sus aliadas más cercanas en la América boreal. Buen forraje, como la mayoría de las Eragrostis. Fué descrita como del Para- guay y ahora por primera vez hallada en la R. A. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 137 288. (158 a, 270 b) Eragrostis pilosa (L.) Bravuv. Hassler Fl, pilc, 1. 35. St. n* 17,765 ex Lillo n* 5,141 (13. 11. 1907) Tafí, Tuc. y de mu- chos otros números de B.-A., C., Cat. Form. (159 a, 211 b) et var. delicatula (Triw.) Hacker. 289. Eragrostis purpurascens Rom. € SchuLr. Roem. 4 Schult. Syst. 1. Mant. 317; Nees ab Es., Agrost. bras. 506; Arech, Gram. urug. 372 n' 2. Syn: Poa purpurascens Link. Enum. $8 (non Spreng.). St. n” 17,381 (20. 11. 1907) Coronel Suárez, F. C. $S., Prov. B.- A. (M. E.). St. n* 19,073 (13. vin. 1908) Canals, F. C. B. - A. € Ros. Prov. Córd. (O. R.). Grama cespitosa, cañas erectas de 40-60 cm. de altura, á veces ramosas. Hojas angostas puntiagudas de un largo de 15-25 cm. Inflorescencia en panoja amplia, desparramada y compuesta. Las espiguillas más ó menos lineares son de un color rojo-morado. Es planta bastante frecuente en ciertos parajes no demasiado secos, y constituye un regular forraje para la hacienda. La citamos por primera vez de la R,. A., pero es extensamente esparcido en los campos graminosos del Uruguay y del Brasil austral. 290. (160 a, 272 b) Eragrostis retinens Hack. € ArEcH. St. n* 16,888 (29. 1. 1907) Las Rosas, La Falda, C., abundante. » » 17,463 (1. nr. 1907) La Barrancosa, B.-A. (M. E.). 291. (273 b) Eragrostis virescens (KrH.) PresL. typica St. n* 15,329 (20. x1r. 1905) Rio IV, C. » » 17,207 (12. 11. 1907) La Diana, Rioja. » » 17,110 (v. 1907) Estancia San Teodoro, Río I, C. » » 18,816 ex Lillo n* 6,009 (1, 1907) Rioja. 3 17 19.506 (10: xi. 1908) Rio IV, C. » » 19,822 ex Lillo n” 4,467 (20. v. 1905) Metán, Salta. 138 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n? 19,823 >» > » 6314] » » 19,524 » » > 8431 j (1898-1902) EBISAM » 20,070 (31. 111. 1909) Carnerillo, Río IV, C. » » 21,432 (18. 1. 1910) Estancia San Teodoro, Río 1, C. Y (273 b) forma major HackEL (274b) var. trachyphylla HackeL var. trichophylla (BewTH.) HackeL nov. nom. Differt a typo foliorum laminis longe patenti-pilosis. Syn: Eragrostis trichophylla Benth. Flor. austral. vir. 644. St. n* 20,499 (16. xrr. 1909) Villa García, Dep. Santa María, cerca de Tanti, Prov. Córdoba (Australia). Nueva para la R. A. KOELERIA Pers. 292. Koeleria Bergii Hierros. Hieron Sert. patag. in Bol. Acad. Nac. cienc. Córdoba, t. HI. p. 376, n” 138 (1879); Plant. diaph. p. 306; Speg. Nov. add. Fl. pat An. Mus. Nac. B.- A.t. vir. (1905) n* 696. St. n* 17,781 ex Lillo n* 5,664 (5. 11. 1907) Cuesta del Infiernillo. Dep. Tafí, Prov. Tucumán á 2,900 m. de altitud, entrando en la formación de los pajonales. St. n* 18,706 (16. 1v. 1903) Laguna del Monte, Dep. Marcos Juá- rez, Prov. Córdoba (M. E.). St. n* 20,694-805-986-21,052-76 (18-20, x11. 1909) abundante en la Estancia Pampa, San Luis (diferentes quebradas) pedanía Can- delaria, Dep. Cruz del Eje, Prov. Córdoba, á 2,000 m. de altitud. Grama de cañas tiesas y lisas de una altura de próximamente 50 cm. Vainas foliares de 11-16 cm. de largo por más ó menos Y mm. de ancho, estriadas, lisas en la faz interior y pubescentes, ó sea re- vestidas de pelos blandos en la faz exterior. Láminas puntiagudas de 10-14 cm. de largo, pubescentes y estriadas, con la margen pes- tañosa. Ligula de 1 */¿ mm. de largo con su ápice truncado débil- mente piloso. Panoja de 8-9 cm. de largo, erecta, densa espicifor- me en la base interrupta. La ráquis de las ramitas y las espigas son sostenidas por pedicelos pubescentes. Los rayos son abrevia- dos, subtrinarios, los superiores tienen la base espigada. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 139 Las espigas son bifloras y las flores fértiles. Las glumas son aguzadas, lampiñas, tornándose á veces el ápice en un color sub- violáceo, siendo su forma lineario-lanceolada; la gluma inferior es uninervada y la superior trinervada. Es un pasto susceptible de prestar buenos servicios como forra- jero. Hasta la fecha fué únicamente conocido de la Patagonia y es extraño de hallarlo en otras provincias y sobre todo en una al- titud semejante. 293. (215 b) Koeleria Kurtzii Hacker Syn. Koeleria Bergii Hieron. forma, K. Domin. in F. Fedde, Repert. nov. spec. regn. veg. v. 11. p. 88 n* 20, (1906). St. n” 19,743 * (31. x11. 1908) Vela, B-A. (M. B.). Especie encontrada últimamente en profusión en las Islas Mal- vinas. 294. (2716 b) Koeleria phleoides (ViLr.) Pers. MELICA L. 295. (l61a, 277 b) Melica argyrea Hacker. St. n” 17,412 (6. 11. 1907) Quequén, B. - A. (M. E.). 296. (278 b) Melica aurantiaca Lam. St. n? 18,434 (8. 1. 1908) Vela, B. - A. (M. B.). 297. (279 b) Melica cordobensis HackeL, reducida á M. Stuckertil Hack. var. cordobensis Hackel véase n* 301. 298. (162 a, 280b) Melica macra Nezs. St. n* 17,182 ex Venturi n* 83 (10. 1x. 1903) Mocoví, Sta.-Fe. » » 18,226 (14. x11. 1907) Ballesteros, C. 140 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 299. Melica papilionacea Lix. Lin. Mant. 31 n* 4; P. de Beauv. Essay 68 tab. x1v. fig. v.; Nees ab Es., Agrost. bras. 483; Steudel, Syn. 290 n* 25; Doell in Mart, Fl. bras. 11. 111. p. 128; Arech. Gram. urmg.393 n* 5; St. n* 19,267 (2. xr. 1908) Est. Sta. Rita, Vela, B.-A. (M. B.). La existencia de esta especie europea ha sido señalada para la R. A. por Grisebach, Hieronymus y otros, pero la gran mayoría de ejemplares asi determinados por ellos, pertenecen á la especie Me- lica argyrea Hackel. La Melica papilionacea. L. se caracteriza por: Rizomas horizontales leñosas. Pajas envainadas de 30-60 cm. de altura, erectas y estriadas. Panoja estrecha de 15-20 cm. Espigul- llas grandes cabisbajas, á veces rojizas Ó moradas; obovadas y obtusas. La consistencia de todas las partes vegetativas es un tanto dura y áspera al tacto. No es adecuado para forraje de vacunos, sino como para yegua- rizos, cuando nueva, pero puede, substituir á cualquier otra, Su área geográfica es B.-A. (Urug., Bras., Europa). 300. (251b) Melica sarmentosa Nezs. 301. (163 a, 282 b) Melica Stuckertii HackeL typica. St. n*? 20,493 (16. x11. 1909) Villa García, Tanti, C. var. cordobensis (HackeL) HACkEL nov. nom. (279 b) 297. Syn: M. cordobensis Hackel 1. c. A última hora y en vista de mayor cantidad de material, nos vimos obligados de reducir esta especie 4 variedad. St, n* 20,405 (15. x1r. 1909) Santa María, Punilla, C. representa la M. cordobensis H. de antes, pero encontrábamos múltiples tran- siciones entre nuestras abundantes muestras, una de ellas, por ejemplo, el n* 21,699 (4. 1v. 1910), Estancia Pampa San Luis, Acha- la, C.42,000 m. de altitud, representa una transición neta, con caracteres de ambas especies y con panoja de ramas compuestas. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 141 302. (253 b) Melica violacea Cav. St. n* 19,742 (31. x1r. 1908) Vela, B.-A. (M. B.). » » 20,914 (22. xtr. 1909) Estancia Pampa San Luis, 1. c. Cór- doba á 2,000 m. alt. DISTICHLIS Rar, 303. Distichlis laxiflora HackEL nov. spec. Stuckert, Herb. arg. n* 17,468 (1. 111. 1907) La Barrancosa, F. C. Sur, Prov. Buenos Aires (Chapal-Malal) remitido por Don Mario Estrada. Perennis, dense caespitosa. Oulmi humiles, ad 20 cm. alti, gracillimi, teretes, glaberrimi, 4-5 folvi, foliis laxiuscule dispositis, apice longiuscule nudi, e basi valde ramos. Vaginae teretes, arctae, internodiis parum longioribus v. brevio- ribus, ore fimbriatae, ceterum glaberrimae. Ligula brevissima, truncata, ciliolata. Laminae setaceo-convolutae (diam. 0,4-0,5 mm.) acutissimae, 4-5 cm. longae, erectae rigidulae, glaberrimae, virides. Panicula lineari-oblonga 3-4 em. long. laxiuscula, rhachi ramis- que scaberulas, his salitaris binisve, primariis imferioribus 2-3- spiculatis in *], inferiore nudis, reliquis unispiculatis, sub- terminalibus breviter pedicellatis. Spiculae. Y (solae quae adsunt) lineares, laxe 5-7 -florae, 9-10 mm. long., 2-2,5 mm. lat., flavo-viridula e, glaberrimae, rhachi- llae internodiis 1,2-1,5 mm. longis floris fertilis quartam partem aequantibus. Glumae steriles subaequales (3-3,5 mm. long.), ovato-lanceolatae, acutae, 1-vel 11. obsolete 3-nerves, usque ad medium floris super- positi pertinentes. Glumae fertiles sese vix ad medium tegentes, lanceolato-ovatae, acutae, 7-9 nerves, nervis viridibus extus prominulas, in gluma flavida valde distinctis. Palea glumam aequans, oblonga, obtusa, carinis brevibus. Antherae anguste-lineares 2 mm. long. 1492 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. "alde affinis D. secopariae Arech. quae vero differt culmis circi- ter 12-foliis, foliis arcte congestis, vaginis internodia longe superantibus spiculis ovali-oblongis densifloris (floribus sese ad */5 usque tegentibus), rhachillae internodiis 0,8 mm. longis, glumae fertilis nervis extus haud prominentibus neque colore a reliqua gluma distinctis. 304. (164 a, 254 b) Distichlis scoparia (KrH.) ARECHAVALETA. St. n* 16,856 (21. 1. 1907) Rio IV, C. » » 17,353 (11. 1907) La Estela, B.-A. (M. E.). » » 15,265-296 (x11. 1905) Villa María y Rio IV, C. » » 19,440 (xxr. 1908) Río IV, C. » » 20,070 (5. 1v. 1909) Arroyo Carnerillo, Dep. Rio IV, C. En la época que visitábamos el lecho del arroyo, ya la natu- raleza estaba muy adelantada, pero vimos en los suelos húme- dos arcilloso-medanosos de diversos promontorios de las barran- cas, plantas de esta especie con inflorescencias femeninas ya mar- chitadas, pero de fácil y seguro reconocimiento, presentándose estas además en multitud de ejemplares incalculables. Fué recién allí donde pudimos notar y estudiar el singular desarrollo de ella, así como sus diferentes formas y los variados estados biológicos, en los que admirábamos en cada uno de los nudos de los estensos y furcados rizomas los brotes nuevos de las punzantes hojas. 305. (285 b) Distichlis spicata (L.) GrEENE. St. n* 17,637 (6. 11. 1907) Nutrias, F. C. S., B.-A. (M. E.). » » 17,7134ex Venturi n* 228 (14, xr. 1902) Barracas alSur, B.-A, » » 17,742 ex Lillo n* 5,265 (22,x11. 1906) El Volcán, Jujuy, á 2,100 m. alt. St. n* 19,825 ex Lillo no 8,425 (23. r. 1906) Maimará, Jujuy. (286 b) forma hirta (PuiL.) OK. (287 b) var. mendozina (PhiL.) HackEL. (288 b) var. thalassica (H. B. K.) OK. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 143 BRIZA L. 306. (290 b) Briza elegans Dorzz. 307. Briza erecta Lan. Lam. lllustr. 1. 187; Nees ab. Es. Flor. bras. 480; Arech. Gram. urug. 404 n* 4; OK. Rev. 111?, 342; Lindman, Gramineenflora Siida- merikas p. 42. Syn: Calotheca brizoidea Beauv. t. xvi. fig. vi. » Chascolytrum erectum Desv. in Journ. bot. 3. 11; Kunth, Gram. 1. 345, t, 86; St. n* 17,968 (7. xu. 1907) Los Cocos, Dep. Punilla, Prov. Cór- doba. St. n* 21,018 (19. x11. 1909) Quebrada Calderón, Estancia Pampa de San Luis, Dep. Cruz del Eje, Córdoba, á 2,000 m. altitud. Cañas de 30-60 cm., simples ó apenas ramificadas, erectas, estria- das. Nudos lisos y estrechos. Vainas foliares más largas que los entrenudos, estriado - surcadas, abiertas en las parte superior, Li- gula membranácea, bastante ancha, con el borde superior subden- tado ó bien dividido en lacinias. Lámina de 15-30 y aun más cm. de largo por 3-4 mm. de ancho, plana y prolongada en punta larga, estriado-asurcada y escabrosa en la cara superior, estriada y lisa en la inferior. Panoja erecta, subespiciforme, de 6-12 cm.; ramificaciones inferiores solidadas en la base; eje anguloso y subflexuoso con dientecitos en las aristas, como igualmente en las ramas y en los pedúnculos. Espiguillas de 6-8 mm. brevemente pedunculadas, florecitas distico-empizarra- das, amarillo - rojizas, violácea-amarillentas, hasta violáceo -obs- curas. Pajitas glumales, aovado-elípticas, puntiagudas. Grama que prefiere terreno arenoso y costas de arroyos ó rios, floreciendo de Octubre á Diciembre; prestando regular servicio como forraje. Su área geográfica es la Prov. B.-A., E.-R. ? y ahora por primera vez la Prov. de Córdoba (Uruguay, Brasil). 308. Briza glomerata HackeL € ARECHAVALETA. Arech. Gram. urug. p. 409 n* 9. Lámina rx. (1894); F, Kurtz, Collectan ad Flor. arg. p. 33 (Bol. ac. Córd. xv. 254), Speg. Flor Tandil p. 55 n* 349. 144 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Syn: Briza glomerata OK. (et Hackel) in OK. Rev. 11?, 342 (1899). St. n* 20,417 (15. x11. 1909) Villa Garcia, cercanias de Tanti, Dep. Punilla, Prov. Córdoba, orillas del arroyo de Mojarras á 100 m. de altitud. St. n* 21,053 (19. x1r. 1909) Quebrada de la Oyada. Estancia «Pampa de San Luis» pedanía Candelaria, Dep. Cruz del Eje, Prov. Córdoba, en las grietas y hendiduras de las rocas, 42,000 m. alt, Grama de rizomas cortas. Pajas simples de 1-2 metros de altura, rectas ó aun acodadas en la base, estriadas, un tanto ásperas en la parte superior. Vainas foliares más cortas que los entrenudos, estriadas hasta estriado-asurcadas, bastante abiertas. Lígula membranácea, obli- cua, borde superior irregular. Láminas planas, lanceolado-agudas, de 20-50 cm. de largo, por 8-10 mm. de ancho, estriadas, un tanto ásperas. Panojas espiciformes, de 8-10 cm. de largo, erectas, inte- rruptas, compactamente densifloras. Eje principal estriado-asur- cado, áspero. Ramificaciones compuestas, numerosas, algunas más cortas y otras más largas que los intersticios de la raquis, angulo- sas, provistas de dientecillos minutisimos en los ángulos, pedúneu- los cortos subflexuosos. Espiguillas verde-amarillentas, lustro- sas, conglomeradas estrechamente, de 2 mm. +, de 4-5 flores. Pajitas glumales herbáceas, aovado -agudas, cóncavas, subpubes- centes en el dorso, presentando á menudo cerca del ápice una coloración morada, Palletas desiguales. Prefiere puntos húmedos, florece de Noviem- bre á Diciembre. Proporciona un buen forraje, pero no se cría en abundancia, Fué descrita como del Uruguay, y se conocia ya de la Prov. B.A. y del Brasil; pero opinamos citarla por primera vez de la Prov. Córdoba. 309. Briza maxima Lixx. Linn. Sp. 103; Kunth, Agrost. Syn. p. 371; Arech. Gram. urug. p. 403 r? 3. St. n* 18,433 (8. 1. 1903) Estancia Sta. Rita, por Estación Vela, Prov. B.-A. (M. B.). St. n* 21,021 (20. x1r. 1909) Estancia «Pampa de San Luis», Sie- rra Achala, Córdoba á 2,000 m. altitud. Pajas sencillas erectas de 30-60 em. cilidricas y lisas. Lámina STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 145 plana estriada lampiña. Panoja terminal, de forma aovada. Rami- llas pedunenlares capilares, largas, simples ó bi-espigadas. Espigui- llas de 1,5-2 em., 13-17-floras aovadas, comprimidas, empizarradas blanquizco-amarillentas, á veces con matices morados. Grama jugosa, excelente forraje, siendo su eflorescencia sólo de corto tiempo. Citada por primera vez de la R. A. (Urug. Europa). 310. 291b) Briza minor L. St. n* 17,460 (1. 111. 1907) La Barrancosa, B.-A, (M. E.). St. n” 19,264. (9. xx. 1908) .] aL sa eos) peo A ES 311. (165a, 292b) Briza stricta (Hook.) STEUD. 312. Briza subaristatla LAmMArckK. Lam. Mlustr. 1 187; Doell, in Mart. Fl. bras. 11. pars, 11. p. 134; Arech. Gram. urug. p. 406 n* 6; Macloskie, Exp. pat. 218. Syn: Chascolytrum subaristatum Desv. Journ. mu. 11. » Briza lamarckiana Nees ab Esenb., Agrost. bras. 481; Ball, Fl. patag. 1. 238. Syn: Briza violascens Steud. Synops. p. 283 n' 20. N. v. Colita de tatú (Chaco). St. n* 16,272 (26. x11. 1906) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » >» 16,681 (29. x11. 1906) Los Cocos, San Esteban, Punilla, C- » » 18,952 (23. vi. 1908) Resistencia, Chaco (H. M.). » » 19,198 (5. x. 1908) Colonia M. Belén, Chaco (H. M.). » » 19,826 :8. xr. 1903) Mocovi, Sta.-Fe, (Venturi). Pajas robustas de 40-80 cm. de altura, hojas sublineares. Pano- ja erecta, espiciforme de 8-15 cm. de largo, contraída, ámbito lanceolado. Ramificaciones cortas, multifloras, compuestas, casi siempre binarias. Las espiguillas son de forma elíptico-ovada y la de las glumas fértiles es orbiculado- cuspidada. Esta especie se parece mucho á la B. triloba Nees. y es como ésta buena forra- jera. La época de su eflorescencia es por Octubre y Noviembre. Su distribución geográfica es desde la Patagonia boreal, B.-AÁ., Santa-Fe, C., Chaco. Urug., (Parag., Bras.). ANAL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.?, T. xrv. Marzo 28, 1911. 10 146 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 313. (166 a, 293 b) Briza triloba Nees. Syn: Briza poaeformis (Spr.) OK. Rev. n1?, 342. » Calotheca poaeformis Spr. (1825) excl. syn. Syst. 1. 348 no 10. St. n* 16,501 (3. x1r. 1906) Córdoba. » » 19,604 (22. x1r. 1908) Los Cocos, Punilla, Córdoba. » » 21,093 (22, x1r. 1909) Pampa de San Luis, Achala, Cór- doba, á 2,000 m. alt. (167 a, 294b) forma pumila Hackez. forma violascens HAckeEL nov. forma. St. n* 17,860 (23. x. 1907) Marcos Juárez, Córdoba, Forma peculiar con espiguillas matizadas de un color pronun- ciadamente morado. var. interrupta HackeL nov. var. Differt atypo paniculae lineari-elongatae ramis brevibus densis- sime floriferis subglomeriformibus a se remotis inde panicula interrupta. St. n* 19,995 (31. 11. 1909) Dalmacio Vélez, F. C. Andino, Dep. Tercero abajo, Prov. Córdoba. Variedad notable de la triloba. 314, Briza uniolae Nezs. Nees ab Esenb. Doell, in Mart. Flor. bras. 1. pars. ur. p. 134; Arech. Gram. urug. p. 408, n* 8; Hackel in Pl. hassl. 11. 278, Syn: Eragrostis Uniolae Nees. Agrost. bras. 494. » Briza Uniolae Nees ab Es. apud Steud. Synops. 1. 288 (1855). St. n* 16,272 aG€G b (26. xr. 1906) ) Colonia Benites, Chaco (N. » » 18,330-33-34 (18. x1r. 1907) ) R.A.). St. n* 19,207-333 (1 á 30. xr. 1908) Colonia Marg. Belén, Chaco (H. M.). Grama robusta de terrenos arenoso - húmedos que emite pajas derechas de 50-80 em. de altura, STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 147 Sus hojas son planas y puntiagudas, de un color verde - ceni- ciento y de una consistencia semidura. La panoja espiciforme es corta y mide tan solo de 5-10 cm. de largo, su color es comunmente verde gris, ostentando sin embargo á veces matices morados. Las espiguillas son relativamente pequeñas, pero bien empiza- rradas, presentando un número reducido de flores. Como forraje es de inferior calidad. Citada por primera vez de la R. A., habiendo sido indicada antes como del Uruguay, Para- guay y Brasil. DACTYLIS L. 315. (289 b) Dactylis glomerata L. St. n* 20,375 (7. x11. 1909), 21,299 (1. 1. 1910) Estancia Sta. Rita, por Vela, F, C. S., Prov. B.-A. (M. B.). BOAL. 316. (168 a, 295b) Poa annua L. St. n” 16,078 (16. x. 1906) inmediaciones de Córdoba. » » 20,518 (16. x11. 1909) en las orillas del arroyo Mojarras, Villa Garcia, cerca de Tanti, Sta.-Maria, Córd. St. n* 21,038 (19. x1r. 1909) Quebrada Calderón y en la planicie de la Sierra de Achala con suma frecuencia, alrededor de las pe- queñas lagunillas, Pampa San Luis, Córdoba á 2,000 m. alt. 317. (169a, 296 b) Poa bonariensis (Lam.) KuntH. St, n* 16,265-67-13-91(26.x1. 1906) - S - Colonia Benites, Chaco austral (N. R. A.). St. n* 17,127 ex Venturi n* 85 (6. xr. 1903) Mocoví, Prov. Sta. Fe. St. no 17,136 ex Lillo n* 5,654 (5. 11. 1907) (forma especial) In- fiernillo, Dep. Tafi, Tucumán á 2,600 m. altitud. St. n* 19,265-143 (x1 y x11. 1908) Vela, B.-A. (M. B.). » » 19,461 (10. x11. 1908) Rio IV, Córdoba. 148 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. forma planifolia HackeL nov. forma. St. ne 16,015 (2 x. 1906)) Colonia Bonitos ] > >» 16,284 (26. xr. Lo ad EM: > » 168120 (15. 1907) / forma scabrifolia HackeL nov. forma. Foliis scabris, callo glumarum fertilium parce longeque pilosa. St. n* 19,197 (5. x. 1908) Colonia Marg. Belén, Chaco (H. M.). Poae sps. affine P. bonariense (Lam.) KruH. St. n” 18,324 (18. x1r. 1907) Col. Benites, Chaco (N. R. A.). » » 18,530 (29. 1. 1908) Sierra Chica, Córdoba. » » 20,984-989-994 (20. xtr. 1909) Los Cocos, Punilla, Prov. Córd. á 1,000 m. al. St. n* 21,025-15 (21. x1r. 1909) Estancia Pampa de San Luis, ped. Candelaria, Dep. Cruz del Eje, Córd. 318. Poa (Droicoroa) calchaquiensis HackeL nov. spec. Stuckert, Herb. arg. n* 17,777 ex Lillo, Herb. tuc. n* 5,065 (29. 1. 1907) formando pajonales en las Cumbres Calchaquies, Dep. Tafi, Prov. Tucumán á 4,200 metros de altitud. Perenmis, dense caespitosa, innovationibus intravaginalibus. Culmi erecti, ad. 12 em. alti, teretes, ylaberrimi, uninodes (nodo in *), inferiore culmi sito). Folia glaberrima. Vaginae arctae, inferiores versus basin dilatatae, emortuae stra- mineae, diu integrae persistentes. Ligula lanceolata, acuta, 2-2,5 mm. longa. Laminae setaceo-convolutae diam. 0,5-0,8 mm., acutae, rigidulae, erectae, inferiores ad 10 cm. long., culmum dequantes v. sub- superantes, superiores vix 2 cm. longae. Panicula linearis v. lineari-oblonga, subspiciformis, densa, con- tracta, basi lobata, rhachi ramisque lacvibus, his binis brevibus suberectis, primario in */, inferiore nudo, secundariis fere a basi spiculiferis (3-5-spiculatis), spiculis imbricatis, superiori- STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 149 bus ramulorum subsessilibus, inferioribus brevipedicellatis, pe- dicellis laevibus. Spiculae Q (solae quae adsunt) ovatae, plerumque 3-florae, 4-5 mm. long., e viridulo, albido et violaceo variegatae. Glumae steriles subaequales (2,5-3 mm. long.), lanceolatae, acu- minatae, 1. I-nervis, 11. in *, inferiore 5-nervis, carina scabrae, 2/3 floris contiguas tegentes. Glumae fertilis lanceolatae, acutiusculae, 3,5 mm. long., O-nerves nervis lateralibus exterioribus vix ultra medium productis, interioribus obsoletis, callo villis crispis gluma lon 1o0ribus haud crebris vestito, carina et nervis submarginalibus ad ?/; v. My pilis brevibus patulis villosula, ceterum laeves. Palea gluma conspicue brevior, lineari-oblonga, acute bidentula carinis ciliolata. Arcte affinis P. bonariensis Kunth., quae differt paniculae rha- chi ramisque scabris, glumis fertilibus acuminatis acutissimas, carina longius villosa; in nostra glumae fertiles fere obtusiu- sculae, minime acuminatae, carina breviter villosula,. 319. Poa chubutensis SpEc. Speg. Nov. add. ad flor pat. in An. Mus. Nac. B.-A. t. vr. p. 196. n” 7103; Macloskie, Exp. pat. p. 225. St. n* 14,990 (1. 11. 1902) Rio Corcovado, Chubut, Patagonia (EN. E: no-90). Grama robusta, densamente cespitosa, de un color verdemar, cuyas cañas alcanzan de 60-100 cm. de altura. Las hojas aparecen plegadas, de margen escabrosa, con el ápice puntiagudo un tanto punzante, las mayores subcoriáceas, de un largo de 10-15 cm. Ligula cortísima tronchada. Panoja amplia semi-combada de 20-30 cm. de largo. La raquis lampiña y los rayos no-escabrosos con pedicelos cortos y lisos. Las espiguillas son bifloras, lanceoladas, erguidas y apretadas. Consistencia semidura y seguramente forraje inferior. Grama endémica de la Patagonia. 150 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 320. Poa (Droicoroa) dolichophylla HackeL nov. spec. Stuckert, Herb. arg. n” 17,718 ex Lillo, Herb. tuc. n* 5,066 (8, vr. 1906) Bajo de Anfama, Dep. Tafí, Prov. Tucumán á 1,600 m. de altitud. Perennis. Culmi erecti, 60 cm. v. plus alti, teretes, glaberrimi nisi infra paniculam scabri, 35-4-nodes, nodo summo circa medium culmum sito. Vaginae arctae, internodia superantes, innovationum compres- sae, culmeae teretiusculae, inferiores scaberulae. Ligula brevis, truncata vel rotundata, 1-2 mm. long. Laminae lineares, acutae, elongatae, inferiores ad 60 cm., sum- ma 15-20 cm. long. paniculam superans, planae, circ. 4 mm. lat., flaccidulae, virides, subtus laeves supra marginibusque plus minus (praecipue versus apicem) scabrae. Panicula ovata, laxiuscula, post anthesin, contracta, ad 20 cm. long., rhachi ramisque scabris, his verticillatis 9-7-nis tenuifili- formibus, inferioribus ad 12 cm. longis in circ. 1), inferiore indivisis, secundariis pluri-spiculatos tertianosque gignenti- bus, spiculis subaequaliter dispositis remotiusculis, subtermi- nalibus breviter pedicellatis. Spiculae Q (solae quae adsunt) ovatae, 5-4-florae, 5 mm. longae, viridulae. Glumae steriles subaequales, 3-3,5 mm. long., ?l3 floris super- positi tegentes, lanceolatae, acutae, 3-nerves, carina superne aculeolatae. Glumae fertiles lanceolatae, acutiusculae, 4-4,5 mm. long., callo villis crispis glumam subaequantibus densiuscule lanatae, carina ad medium usque, nervis lateralibus prominentibus ad 1/¿ usque villosulae, in interstitiis nervorum glaberrimae. Palea gluma paullo brevior, lineari-lanceolata, apice anguste truncatula, integra, carinis ciliata. Affinis P. Sellowii Nees., sed jam lonyzitudine foliorum earum- que scabritie ab hac diversa, ceterum palea carinis ciliata ab omnibus speciebus affinibus differt. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 151 321. Poa glomerifera HAckEL nov. spec. Stuckert, Herb. arg. n* 17,744 ex Lillo Herb. tuc. n* 5,622 (1. 11. 1907). Terreno pedregoso, Cumbres Calchaquíes, Dep. Tafí, Prov. Tucumán á 4,250 metros de altitud. Perennis robusta, circ. 40 cm. alta. Culmus erectus, subcompressus, scaber, ad apicem usque foliatus, 3-nOdis. Vaginae in basi culmi dense aggregatae, inferiores valde dilata- tae, laxae, compressae, innovationum complanato-complicatae, in statu complicato circ. 1 cm. latae, flabellato-subdistantes, scaberulae, infimae marcescentes fuscescentes. Ligula late ovata, obtusa circ. 9mm. long., dentata. Laminae late lineares, sensim acutatae, acutissimae, planae, inferiores ad 30 cm. long., 8 mm. lat., rigidae, glauco-virides, utrinque marginibusque scabrae vel superius scaberrimae, tenuinerves. Pamicula ovata, patens circ. 12 em. long., rhachi ramisque sca- berrimis, his binis elongatis, in ?/z inferiore indivisis, superius ramos secundarios a basi densissime multispiculatos glomeri- formis gignentibus, glomeris ovatis circ. 1 cm. longis sibi ita arcte approximatis utomnes in glomerum communem obovato- oblongum circ. 3 cm. longum lobatum paniculae ramum ter- minantem confluant. Spiculae in glomeris densissime imbricatae, subsessiles v. brevis- sime pedicellatae, ovatae, ó-flores, floribus hermaphroditis, 7 mm. long., virides et dilute aureo-violaceoque variegatase. Glumae steriles subaequales, 5,5-6 mm. long., fertiles fere usque ad apicem tegentes. [. anguste lanceolata, setaceo- acuminata, I-nervis. IT. late lanceolata, acuta, 3-nervis, utraque carina spinulosa, ceterum scubra. Glumae fertiles late lanceolatae breviter acuminatae, 6 mm, long., callo pilis crispis vix dimidiam glumam aequantibus parce barbata ceterum glabra, undique scabra, carina scabe- rrima, 5-nervis, nervis lateralibus brevibus, parum conspicuis. Patea gluma conspicue brevior lineari-oblonga, obtusa obsolete bidentula, carinis spinulosa. Antherae 3 mm. long; ovarium glabrum. 1592 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Species distinctissima habitu Dactylis glomeratae L£., ex descrip- tione remote affinis P. phalaroidi Nees, quae vero differt culmo brevi, panicula ramis brevibus, gluma 1. 3-nervi, 1. 5-17-nervi, glumis fertilibus T-nerviis, ad nervos inferne villosis. 322. (297 b) Poa holciformis Presz. 323. Poa lanigera Nees. Nees ab Es., Agrost. bras. 491; Hieron. Sert. patag. p.314 no 134; Pl. diaph. p. 303; Speg. Flor. vent. p. 71 n* 334; Flor. Tandil p. 56 n* 354; Macloskie, Exp. patag. p. 228; Arech. Gram. urug. p. 414; Berro, Gram. de Vera p. 102 n* 50, St. no 17,528 (12. vi. 1907) cultivado en el Jardin botánico de B.-A. proveniente de semillas del Sur de B.-A. Pajas robustas erguidas de 40-70 cm. de alto. Vainas foliares comprimidas. Lígula corta y tronchada. Lámina plana y puntia- guda de 10-20 cm. de un verde plateado hasta morado. Ramifica- ciones cortas entre si y las espiguillas achatadas y lanosas. Grama precoz para florecer, prefiriendo terreno húmedo y bajo. Como forrajera es de calidad secundaria. Su área geográfica es desde la Patagonia, B.-A., C. (Chile, Urug,, Brasil.) var. Stuckertii HackeL nov. var. Differt a typo culmi manifeste elato-robusti, 60-100 cm. alti, foliis valde elongatis latioribus (15-50 cm. longis, ad 6 mm. latis). St. n* 20,862 (19. xr. 1909) Q ;n* 21,057 (20, x11. 1909) y; n” 21,058-60 (20, x11. 1909) Q. En varias quebradas de la estancia Pampa de San Luis, pedanía Candelaria, Dep. Cruz del Eje, Prov. Córdoba, 4 2,000 m. de altitud. Planta hermosa y robusta del porte de una Cortaderia. La con- sistencia de las hojas es algo dura y no parece adecuada para forraje. var. tandilensis HackeL nov. var. Differt a typo glumis fertilibus etiam inter nervos a basi medium usque dense puberulis. O. Kuntze (x1. 1892) Tandil, Prov. Buenos-Aires. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 03 Syn: Poa Sellowíi OK. Rev. 11?, 371 (non Nees). Á nostra varietate differt typica panicula ovata expansa, glumis sterilibus quam fertilis 1/3 brevioribus, fertilibus prominenter nervosis basi parcius breviterque lanuginosis, palea carinis sca- bra nec villosula, culmo binodi, laminis cartilagineo-margi- natis, 324. (110 a, 298b) Poa lanuginosa Porr, St. n* 16,120 Q (2.xr. 1906) Ochoa, Santa Maria, C. » » 16,481 Q (20. xr. 1906) Córdoba. » » 18,012 * (24, xr. 1900) Rio Corcovado, Chubut, (N. 1, mo 16). Poa spec., affinis Poae lanuginosae Porr. an ? nov. spec. (nunquam Poa chubutensis Speg.). St. n* 18,010 (1. 1. 1901) entre Bolson y Colonia 16 de Febrero, Chubut, Patagonia (N. I. n* 238). 325. Poa (Eupoa) Lilloi HackeL nov. espec. Stuckert, Herb. arg. n*? 17,141 ex Lillo, Herb. tuc. n* 5,619 (21. 1. 1907) Prados graminosos en las Cumbres Calchaquies, Dep. Tafi, Tucumán á 4,500 metros de altitud. Perennis, dense caespitosa, humilis, innovationilus et intra-et ex- travaginalibus. Culmi erecti, 8-10 cm. alti, graciles, teretes, glaberrimi urinodes, nodo in circ. */; inferiore culmi sito. Folia in quovis culmo 2-3, glaberrima. Vaginae arctae, glaberrimae, emortuae, alutaceae, haud dense aggregatae. Ligula lanceolata, acuta, circ. 2 mm. longa. Laminae setaceo-complicatae (diam. circ. 0,8 mm.) obtusiusculae, breves, inferiores ad 4 cm., summa ad. 1 cm. longa, rigidulae, leviter curvatae, virides. Panicula oblongo-ovata, 2-3 cm. long., patens, densiuscula v. laxi- uscula, rhachi ramisque tenui-filiformibus subflexuosis scabe- rulis, ramis inferioribus binis, superioribus solitariis, ad medium usque nudis, primariis inferioribus 2-3- spiculatis, 154 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES superioribus secundariisque unispiculatis, panicula tota e spi- culis 12-16 approximatis brevipedicellatis vel subsessilibus formata. Spiculae ovatae 3- florae, 5 mm. longae, e viridi et violaceo varie- gatae. Glumae steriles subaequales, 3,5 mm. longae, circ.*/¿-floris super- positi tegentis, lanceolatae, acutae, acuminatae. 1. 1-nervis, carina scabra, IL. 3-nervis, carina dorsoque scabra. Glumae fertiles, oblongae, obtusae vel obtusiusculae, 3,5 mm., lony., nervis lateralibus valde prominentibus, omnino glabrae undique scabrae in *|z inferiore herbaceae, virides superins violascentes, apice membranaceo flavescentes. Palea glumam aequans, lineari-oblonga, obtusa, integra, carinis scabra, Antherae in omnibus spiculis hebetatae, 0,5-1 mm. longae, sine polline; Ovarium glabrum. Species distinctissima, inter Eupoas et Dioicopoas ambigens. Nam spiculae speciminum nostrorum, quae primo intuitu her- maphroditae videntur, propter antheras effoetas polline omni- no destitutas revera foemineae sunt, masculas non vida. Inter Dioicopoas jam glabritie glumarum fertilium (quae in spi- culis foemineis aliarum speciorum saltem callo villosae sunt) excellit. 326. Poa lobata HackeL nov. spec. nomen ad interim. Affinis P. lanigerae Nees, a quae praecipue differt: glumae steriles uninerves, inflorescentia densiora, etc. St. n* 20,372 (7. x11. 1909) Estancia Santa Rita, por Vela, Prov. Buenos-Aires (M. B.). Ejemplar incompletamente desarrollado, por lo que nos reser- vamos de emitir un diagnóstico posterior, en espera de material mas amplio. 327. Poa micranthera HackeL nov. spec. ad interim. St. n* 19,827 ex Lillo n” 5,468 (24. 1. 1907) Cuesta de Anfama, Dep. Tafi, Tuc. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 155 Ejemplar demasiado incompleto para atreverse á un diagnós- tico acertado. 328. Poa (Eupoa) muñozensis HAckEL nov. spec. Peremnis, caespitosa, innovationibus intravaginalibus. Culmi graciles, 20-40 cm. alti. teretes, superne scabriusculi, unino- des nodo infra *|, inferiorem culmi sito, superne breviter nudi. Vaginae teretes, arctae, scaberulae v. scabrae, emortuae strami- neae, integrae. Ligulae lineari-oblongae 4-8 mm. longae, obtusae v. acutiusculae. Laminae setaceaev. subjunceae, complicatae, diam, circ. 0,7 mm. sensim in acumen tenue subspungens acutatae, inferiores cul- mum saepe aequantes vel superantes, rarius eo breviores, 20-30 cm.long., rigidulae, glauco-virides, deorsum plus minus sca- brae, intus minute puberulae, nervis ibique parum prominulis. Panicula ovata, laxa, patens, 8-13 cm. long., L-7 em. lat., rhacli ramisque scabris; rami bini capillares subflexuosi, subnu- tantes, in ?/¿ inferioribus indivisi, apice tantum spiculifera, primario inferiore circ. 5-6 cm. longo, secundarios paucos 1-3- spiculatos edente, spiculis in apice ramorum subconfertis brevi- ter v. brevissime pedicellatis. Spiculae ovato-ellipticae 2-3-flores, 5 mm. long., e viridi, flaves- cente et sordide violaceo variegatase. Glumae steriles subaequales (3-3,5 mm. long.), lanceolatae, acu- tae, carina scabra, 1. 1-nervis, II. 3-nervis, ad 3/, floris conti- gui pertinens. Glumae fertiles lanceolatae, acutae, 4-5 mm. long., 9-nerves, nervis lateralibus vix ad medium productis, callo nudo, carina inferne brevissime ciliatae superne scabrae toto dorso minute punctulato-scabrae, apice flavido-scariosae, basi virides, medio violascentes. Palea gluma conspicue brevior, oblonga, bidentula, carinis sca- bra. Antherae, 2,5 mm, long.; Ovarium glabrum. Stuckert, Herb. arg. n” 18,833 ex Lillo, Herb. tuc. n” 7,441 (27 1. 1908) Pajonales in monte Cerro Muñoz, Dep. Tafí, Tucumán á 3,900 m. alt. Stuckert, Herb. arg. n* 18,851 ex Lillo, Herb. tuc. n* 7,955 (25 1. 1908) Ciénegas in monte Cerro Muñoz, Dep. Tafí, Tucumán á 3,900 m. alt. 156 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Arcte affinis P. Lillo Hackel, quae differt culmo humili e caes- pite longe exserto superne longe nudo, foliis brevibus (ad 4cm. long.) vix medium culmum aequantibus, laevibus, ligula brevi, laminis obtusiusculis, panicula brevi densiuscula ramáis brevibus simpliciusculis inferne breviter nudis, glumis fertila- bus obtusiusculis v. obtusis, nervis prominulis ultra medium productis carina glabris, palea (lumam aequante, antheris brevibus uv. hebetatis. Propter antheras saepe hebetatas P. Lilloi inter Eupoam et Dioicopoam ambigere putavi; propter arctam affinitatem cum P, muñozensi vero nunc eam ad Eupoas refero. 32%. (299b) Poa myriantba HackuL. 330. Poa nemoralis Lax. Lin. Spec. pl. ed. 1. p. 69 (1753); P. Dusén, Svensk. Exp. mag. 111. p. 223;Alboff, El. rais, Tf. xi. n*550; Autran, Pl. feu 10; Maclos- kie, Exp. pat. p. 229; Wildeman «Belgica» 46. St. n” 16,094 (24. x. 1906) Alrededores de Córdoba. » » 21,068 (20, xtr. 1909) Los Cocos, Punilla, Córdoba. Grama delgada y lampiña de tallo erguido de unos 50 cm. de altura. Vainas foliares mas cortas que los entrenudos. Lígula tron- chada. Hojas de 6-8 cm. de largo por 2 mm. de ancho. La panoja abierta y desparramada presenta rayos erectos. Las espiguillas de forma aovado-lanceolada, compuestas de 2-5 flores, son de un largo de 3-5 mm. Su consistencia es blanda y ella es considerada buena forrajera. Fué citada de la Tierra del Fuego y de la Patagonia austral y ahora por primera vez de Córdoba, siendo común en Europa, de donde probablemente fué introducida, pero se produce también en la América boreal y la Asia. 331. Poa patagonica PHILIP. ? Phil. An. Univ. Chil. xc1v. p. 168 (1896); Speg. Plant. pat. austr. p. 585, no 409; Macloskie, Exp. pat. p. 229. St. n” 18,008 * (20. 111. 1901) Valle de Avilas, Chubut, Patagonia, (N. I. n* 214). Philippi describió esta especie del Sud de Patagonia, con sólo un ejemplar Y á la vista. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 157 Pero, como en la sección Dioicopoa el aspecto y los caracteres de los ejemplares Z y Q á veces difiere mucho y el ejemplar de nuestro número es de sexo femenino, viene á resultar por consi- guiente muy difícil su identificación. Las hojas de nuestro ejem- plar son ásperas en la totalidad de su superficie y no sólo en las puntas, como Philippi indica para su especie. 332. Poa pilecomayensis Hacker. Hackel, in Hassler, Novit. paraguar. ex Fedde, Repert. vr. (1909) p. 346. var. calamagrostoidea Hacker. Syn: Poa calamagrostoidea Hackel in lit. eh cum diagnos. Differt a typo glumis sterilibus quam fertilis Mz (in typo vix '/,) brevioribus, glumis fertilibus acutiusculis v. obtusiusculis (in typo acuminatis), nervis extus haud vel parum prominulis (in typo manifestis). Stuckert, Herb. arg. n” 17,180 ex Lillo, Herb. tuc. n* 5,064 (9. vr. 1906) Bajo de Anfama, Dep. Tafí, Tucumán, á 1,600 m. altitud. Stuckert, Herb. arg. n” 18,837 ex Lillo, Herb. tuc. n* 1,534 (4. 11. 1908) El Rincón, Dep. Tafi, Tucumán, á 2,250 m. altitud. Stuckert, n” 18,552 ex Lillo, n* 7,956 (25. 1. 1908) In praeruptis humides (quebradas húmedas) Cerro Muñoz, Dep. Tafí, Tucumán á 2,100 m. altitud. Area geográfica: la de la tip. Form. rio Pilcomayo (Paraguay) de la var: Tucumán. 333. Poa pratensis Luix. Lin. Spec. pl. ed. 1. p. 67 (1753); Gay, Fl. chil. vr. p, 410; Kunth, nia 1 302 Hook. tf. Ele antarct. 1. 3(9. E. Phil. Cat, Pl chil. p. 332; Franchet, Mis. Cap. Horn. 356; Speg. Pl. per Fueg. p. 89 n” 261; Plant. pat. austr. p. 585 n* 410; Prim. Chub. p. 628 n* 206; Fl. Tandil p. 55 n* 352; Alboff, Terrefeu 111. 46 n” 213; Flore rails. Terrefeu xi. n% 544; P. Dusén, Svensk. Exp. mag. 111. p. 223; Wildeman, «Belgica» 46; Macloskie, Exp. pat. p. 229; Autran, Pl. T. feu 11. 13; Rendle, Prichards, pat. pl. 324; 158 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Syn: Poa compressa L. var. virescens D'Urv. Mém. Soc. Lin. 1v. 600. » Poa alpina Brongn. Duperron Voy. coq. 44. (non L.) St. n” 18,014 (15. 1. 1901) Cholila, Chubut, Patagonia (N. 1. n* 285). » » 18,105-107 (16. 1v. 1908) Laguna del Monte, Dep. Marcos Juárez, Prov. Córdoba (M. E.). St. n* 20,327 (30. x. 1909) Cercanías de Córdoba (forma baja). » » 21,064 (20. xtr. 1909) Los Cocos, Punilla, Córdoba. Pajas lisas de 60 cm. de altura. Hojas de 10 cm. x< 1,6 mm,, las basales generalmente un poco mayores. El largo de las vainas no excede al de los entrenudos. Lígula tronchada. Panoja desparra- mada hasta piramidal, ramitas ásperas. Las espiguillas llevan de 3-5 flores y son más largas que los pedicelos. Las flores en el dorso y en las márgenes son densamente vellosas y unidas entre si con lanas largas. Regular forrajera. Fué citada como de la Tierra del fuego, Pat. austral y recién de Córdoba (Chile, Europa). var. subcaerulea (Sm.) AscHers. € (GRAEBN. Aschers. € Graebner, Syn. Mitteleuropa Fl. 11. 433 (1900). Syn: Poa subcaerulea Sm. Engl. Bot. t. 1,004 (1801). St. n* 18,011 (10. 11. 1901) Nafofo-Cahuello, Chubut, Patag. (N. I. n* 248). Esta variedad difiere de la especie típica por su estatura más baja, alcanzando en lo general las cañas sólo 4una altura de 10 cm. Las hojas (preferentemente su faz superior) son de un color verde- mar. La panoja es corta, aovada y algo contraída. Las espiguillas compuesta cada una de tres á cinco flores, son de un verde azulado, La citamos por primera vez de la R,. A., siendo considerada ori- ginaria de la Europa media y de la del Norte. 334. Poa scaberula Hook. f. N. yagán: Cilováia-shulca; aelakalutf: Shakálú. Hook, f. Fl. antarct. 1. 318; Gay, Fl. chil. vi. 404; F. Phil. Cat. Pl. chil. 332; Gris. Symb. n* 1841; Hieron. Plant. diaph. p. 303; Speg. Plant. fueg. p. 90, n* 262; Plant. pat. austr. p. 586 n* 411; P. Dusén, Svensk. Exp. mag. m. 223; Alboff, Flor. rais. Terrefen. xi. n*545; Macloskie, Exp. pat. 231; Wildeman, «Belgica» 9. 47; A, Rendle, Hesketh Prichards pat. pl. 324; R. E. Fries, Alp. Flora arg. (1905) p. 183. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 159 St. n” 17,980 (15. 11. 1901) Río Corcovado, Chubut, Patagonia (N. I. n? 42 (sub P. carrenleofuensis «Speg» ?) No fué posible encontrar, ni esta denominación, ni su descrip- ción, considerándola como mero nombre. En todo caso la muestra no difiere de la P. scaberula Hook. f. St. n* 17,981 (1. 1, 1901) Cholila, Chubut. (N. L. n*259 sub eo no- mine). St. n* 20,739-806-848-879-917-999-21,054-091-(19-23. x1r. 1909) en Tanti y sus inmediaciones, en la estancia de «Pampa San Luis», ped. Candelaria; Dep. Cruz del Eje, Prov. Córdoba, en sus diferen- tes quebradas, desde 1,000-2,000 m. altitud. Pajas de 20-80 cm. de altura, delgadas, lisas, enderezadas y un tanto ásperas. Hojas planas, lineares, enrolladas, exiguas, las que se presentan hasta el vértice de la panoja. Vainas foliares ásperas. Panoja subdensa ó combada. Espiguillas estrechas, glumas de- siguales. La gluma fértil es trinervada y las flores son lanudas. Como forrajera es de poca importancia. Ha sido citada de la Tierra del Fuego, Pat. austral, Córdoba y Jujuy (Chile). 335. Poa (DioicoroA) superata HackEL nov. spec. Perennis, Culmi erecti, graciles, teretes, glaberrimi, 18-25 cm. alti, 3-nodes, nodo summo circ. in */z inferiore culmi sito, om- nino foltis tecti. Vaginae arctae, internodia superantes, glaberrimae, emortuae cito marcescentes. Ligula oblonga, truncata, denticulata, circ. 3 mm. longa. Laminae anguste lineares, sensim acutatae, breviter acuminatae, 10-12 cm. long., 1-2 mm. lat., superiores quam inferiores ple- rumque longiores latioresque, planae, valde flaccidae, glabrae, in *, superiore subtus marginibusque scabrae, virides, tenui- NETUES. Panicula ovato-oblonga, circ. 10 cm. long., patens, laxa, folio summo «anthesi valde superata, rhachi laevi tenui subfle- xuosa apice fere capillari unde panicula apice subnutans, ra- mis inferioribus 3-4-nis subcapillaribus flexuosis laevibus, pri- mariis in *, inferiore indivisis ad 4 cm. longis multispiculatis, secundariis -3-6-spiculatis, spiculis versus apicem ramorum congestis, neque vero imbricatis, pedicellis eas aequantibus vel in subterminalibus duplo brevioribus fultis. 160 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Spiculae Q (solae quae notae sunt) ovatae, 3-4-florae, 5-6 mm. longae, viridulae et leviter violaceo-variegatae. Glumae steriles inaequales: 1. 2,5 mm. long., ad. medium floris contigui pertinens. 11. 53,5 mm. long., ejus ?/, tegens, utraque lanceolata, acuta, glaberrima. Glumae fertiles lanceolatae, obtusiusculae v. obtusae, 45 mm. long., a basi ad medium usque undique breviter appresseque pubescentes nec callo nec nervis longius pilosae, nervis latera- libus tenuissimis vel intermediis obsoletis. Palea glumam subaequans, lineari-lanceolata, breviter acuteque bidentata, carinis inferne puberula. Stuckert, Herb. arg. n* 17,733 ex Lillo n* 5,604 (29. 1. 1907). Cumbres Calchaquies, Dep. Tafi, Prov. Tucumán, á 4,200 m. de altitud. Species erimia nulli arctius affinis, inter Dioicopoas jam foliis mollibus paniculam superantibus et glumis fertilibus non callo carinis nervisque longius pilosis sed in “|, inferiore undique aequaliter pubescentibus distincta. De modo innovandi nihil notum, cum culmi segregati tantum suppeditent, sed vix caes- pitosa videtur. Poa sps. St. n* 18,013 (1. 1. 1901) Cholila, Chubut (N. 1. n* 198) (sub Poa pallens Poir.). St. n* 19,829 ex Lillo n* 1,223 (13. x1r. 1888) La Ciénaga, Tafi, Tuc. á 2,600 m. St. n?” 19,830 ex Lillo n” 4,248 (23, 11. 1905) Cerro Muñoz, Tafi, Tuc. á 4,000 m. St. n” 19,831 ex Lillo n* 8,422 (1. 1838) Tafi, Tuc. á 2,200 m. » >» 19,832 >» » » 8,423 (xIz. 1888) Ciénaga, Tafi, Tuc. á 2,600 m. St. n” 18,858 ex Lillo n* 7,962 (7. 1. 1908) El Negrito, Tafí, Tuc. a 4,800 m. St. n* 20,613-14 (16. x1r. 1909) Camino de Tanti á Pampa de San Luis, C. St. no 20,594 (18. x1r. 1909) Quebrada de Manzano, Pampa de San Luis, C., á 2,000 m. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 161 St. n* 21,030 (19. xir. 1909) Quebrada de Calderón, Pampa de San Luis, C., 4 2,000 m. St. n* 21,905-96 (22. x11. 1909) Planicie de Achala, Pampa de San Luis, C., á 2,000 m. La mayoría de estas especies pertenecen probablemente á la sección de Dioicopoa, las que no pueden determinarse, sin tener plantas de ambos sexos á la vista, salvo que se distingulesen no- tablemente de las ya descritas, como sucedió con algunas prece- dentes. Paulatinamente y con gran paciencia, cotejando las colec- ciones de las grandes universidades europeas, tal vez podrá obte- nerse la determinación de uno ú otro de nuestros números. En cuanto al ejemplar del n* 18,558, es muy probable perte- nezca á una nueva especie, pero resulta, que los ovarios de sus glumas se encuentran invadidos de un hongo, dando lugar á for- mas anormales, así en las glumas, como en las espiguillas, alteran- do hasta el aspecto y la forma de la panoja entera. GLYCERIA R. Brown. 336. Glyceria plicata Frres. Fries, Nov. Mant. 11. p. 176 (1842). Syn: Glyceria fluitans (L.) R. Br. subsp. plicata Fries Nov. Mant. 11. p. 6 (1839). var. secabriflora HackeL noy. var. Differt a typo panicula contracta angusta, glumis fertilibus apice rotundatis toto dorso scabro-punctatis, antheris parvulis (0,8 mm. longis). St. n* 2,100 (18. 1v. 1897) Estancia S. Fermín, Partido General Rodríguez, B.-A. (Fladdrich). St. n” 17,473 (1. 11. 1907) La Barrancosa F. C.S., B.-A. (M. E.). » » 19,828 ex Lillo n” 8,049 (2. xr. 1903) B.-A. » 21,307 (1. 1. 1910) Vela, F. C. S., Prov. B.-A.(M. B.). Planta de terreno húmedo y de rizomas duras. Cañas de 20-30 em. de largo, por 6-8 mm. de ancho. Panoja erguida, larga y compuesta, midiendo unos 30 cm. Espi- guillas lustrosas, sublineares, algunas sentadas, pero la mayoría cortamente pedunculadas. AnaL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xrv. Manzo 30, 1911. 11 169 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Excelente pasto de forraje, buscado con avidez por las hacien- das. Florece de Diciembre 4 Marzo. La planta progenitora no fué citada hasta ahora de la América del Sud, es considerada de origen europeo. var. spicata (Guss.) LanGE. Lange in Natur. Foren. Kjóbenhav. 2. 11. (1860) p. 45. Abundante en varios puntos de la Estancia Pampa de San Luis, Dep. Cruz del Eje, Córdoba sobre » » 21,016 (19. x11. 1009) | todo en la Quebrada Calderón á 2,000 m. alt. Syn: Glyceria spicata Guss., Flor. sic. Syn. 11. 784 (1844). No pudo encontrarse ninguna diferencia: entre los ejemplares argentinos y sicilianos. Esta variedad está debidamente fundada, consistiendo la dife- rencia principal con la genuina, en que la inflorescencia es más sencilla (por lo que superficialmente mirada, parece espiciforme) aconteciendo, que cada ramo inferior de la panoja no presenta más que un sólo ramo lateral basal con una única espiguilla, mientras que la G. plicata genuina lleva 2-4 ramos laterales basales (á lo menos en los nudos inferiores) munidos cada uno con varias St. n? 20,652 (18. x1r. 1909) espiguillas. ATROPIS Ruer. 337. Atropis argentinensis HackkL Hackel in R. E. Fries, Ark. f. Bot. viu, 8. 1v.45 (1908). forma mendozina Hacker l. c. (300 b) Syn: Atropis convoluta Gris, var. mendozina Hackel in St. Gram. arg. Contrib. 11. p. 519 n* 300, St. n* 15,958 ex F. Kurtz n* 1,481 (5. 1. 1893) Lag. Piedras negras, Mend. St. n” 17,784 ex Col. Rodríguez (27. xr. 1903) B.-A. » » 18,710 (16. 1v. 1908) Laguna del Monte, Dep. M. Juárez, C. (M. E.). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 163 Planticula perenne, cespitosa sin estolones. Cañas erectas gra- ciosas hasta de 25 cm. de altura, algo tiesas y lampiñas, demues- tran dos nudos, siendo su extremidad corta y calva. Las hojas son lampiñas cortas y erectas, todas convolutadas. Panoja linear- oblonga, contraída, laxa de 10-12 cm. de largo. Espiguillas oblongo- lineares, minutas, las más veces trifloras, de 4-5 mm. de largo, de un color verduzco ó amatizadas de morado claro. La especie tipica fué citada de Jujuy, la forma de B.-A., Mend. y Córdoba. FESTUCA TournN. Ex LiN. 338. (301b) Festuca acanthophylla Desv. 339. (302 b) Festuca calchaquiensis Hackur. St. n? 17,790 ex Lillo n* 5,621 (2. 11. 1907) Cumbres Calchaquies, Dep. Tafi; Tuc. á 4,600 m. de altitud. St. n* 18,857 ex Lillo n* 7,961 (7. 1. 1908) Cumbres Calchaquies, «El negrito» Dep. Tafí, Tuc. á 4,500 m. altitud. 340. Festuca chubutensis S?zc. ? an? altr. sp. St. no 18,803 (4, 111. 1901) Río Corcovado, Chubut (N. I. n* 72 sub eo nomine). No poseyendo la descripción de esta especie, es imposible saber, si su determinación es exacta Ó no. var. submutica HackeL nov. var. St. n” 17,973 (20. 11. 1901) Valle de Avilas, Chubut (N. IL. n* 203 de 204 sub Festuca sp.). Estos ejemplares concuerdan bastante bien con los anteriores, excepto la arista, que queda reducida á una punta casi mocha, representando asi la variedad indicada. 341. Festuca Commersoni FraAxcHer. Franchet, Mis. Cap. Horn. p. 388; Speg., Pl. Fuegia 95 n* 273; Alboff, El. rais. Terrefeu x1r. n* 539; Autran, Pl. feu p. 13; P. Du- 164 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. sén, Svensk, Exped. mag. 111. p. 228; Neue «ú selt. Gefásspfl. p. 11; Macloskie, Exp. pat. p. 234. St. n* 17,972 (18. 1. 1901) Río Corcovado, Chubut, Patagonia (NAL: mo6L): Grama cespitosa, lampiña verdemar. Cañas lisas, delgadas, erectas de 50 cm. de altura. Hojas cortas, junciformes, rigidas, punzantes. Panoja breve con sus rayos inferiores largos y espar- cidos. Espiguillas de 3-4 flores, 4 menudo viviparas. Glumas rojizas aovado-lanceoladas, ásperas, con margen pesta- ñoso. La gluma fértil más larga, provista de una cerda fina. Palle- ta pestañoso-aquillada. Inservible como forraje. Ha sido citada de la Tierra del Fuego, de Santa Cruz, de la Pa- tagonia occidental y recién del Chubut (Magellanes). 342. (303 b) Festuca dissitiflora Sreup. St. n” 20,906 (20, xt. 1909) Quebrada de Manzano, Estancia Pampa de San Luis, Sierra de Achala, Córdoba 42,000 m. dealtitud. (304 b) var. loricata Gras. 343. (305 b) Festuca eriostoma Hacker. St. n* 17,791 ex Lillo n* 5,616 (2. 11. 1907) Pajonales, Cumbres Calchaquies Dep. Tafi, Tuc. 4,500 m. altitud. St. n* 18,830 ex Lillo n* 7,440 (27. 1. 1908) Cerro Muñoz, Dep. Tafí, Tuc. á 3.200 m. altitud. 344. (171a, 306b) Festuca Hieronymi HackeL typica. St. n* 16,119 (2. xr. 1906) Ochoa, Santa María, C. » » 16,816 (14. 1. 1907) Capilla del Monte, C. » 17,789 ex Lillo n* 5,658 (12. 11. 1907) Infiernillo, Dep. Tati, Tuc. á 2,200 m. St. n” 21,062-99 (20, xu. 1909) Estancia Pampa de San Luis, Achala, Córdoba á 2,000 m. alt. (507 b) forma panicula expansa Hacker. En la Revista de la Facultad de agronomía y veterinaria de la Universidad de La Plata tom. v. (1909) p. 160 y siguientes, los Doc- STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 165 tores Heráclio Rivas y César Zanolli presentaron una disertación sobre una enfermedad de animales mulares, equinos, bovinos y lana- res, llamada la Tembladera. Esta enfermedad es provocada por la ingestión y la consiguiente absorción en las vísceras abdominales de ciertos parásitos fungosos, que se encuentran anidadas sobre la graminácea Festuca Hieronymi Hackel y la Festuca setifolia Steu- del, extentiéndose esta invasión probablemente también á otras especies y géneros de la misma familia. Los autores nombrados llaman á este hongo parásito Endoconidium Tembladerae. Queda constatado, que las sustancias que segregan ó producen estas gra- mas son verdaderos hongos, tienen un gusto azucarado y son meloso-glutinosas al tacto. Ellas vienen á ser por esta infección según las averiguaciones y análisis de los autores nombrados altamente venenosas y ocaslo- nan, ingeridas en la economía animal, una intoxicación parcial 6 completa, muchas veces con consecuencias letales, Se nos surje la sospecha que la toxicidad de la Festuca quadri- dentata Kth. del Perú sea debida á una idéntica ú análoga infección. Los ejemplares de nuestros herbarios de las especies F. Hieronymi Hackel y F. setifolia Steud. no demuestran de alojar el tal parásito y en los lugares en las Prov. Córdoba y Tucumán de donde las hemos recogido no hemos oido, que su ingestión haya ocasionado accidente fatal alguno. En nuestras recientes colecciones pudimos constatar la infección de parásitos fungosos semejantes en la especie Diplachne fusca (L.) P. B.y en la de Aristida Adscensonis L. var., plantas que también crecieron en ciertas altitudes y terrenos rocallosos de la Prov. de Rioja. Los tallos y espiguillas presentaban una glutinosidad y es- tas últimas tomaban un crecimiento exhuberante hasta diforme. Nosotros no hemos sometido las plantas infectadas á ensayos microscópicos para este fin, pero ponemos gustosamente nuestras muestras á la disposición de los descubridores del «Endoconidium Tembladerae». El nombre vulgar de Hiro ó Paja hiro pertenece con más propie- dad á la especie FF". eriostoma Hackel y no ála F. Hieronymi Hackel. 345. Festuca monticola R. A. Phiutepr. R. A. Philippi, Anal. Univ. Chile (1873) p. 516; F. Philippi, Cat. Pl. chil. p. 324; St. n* 17,971 (5. 1. 1901) Cholila, Chubut, Patagonia (N. I. n* 128). Grama lampiña, lisa, cespitosa. Cañas binudas, comprimidas 166 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. con el ápice desnudo, de 60 cm. de altura. La base de las vainas está envuelta en hojas blanquizcas muertas. Las hojas son estria- das, rígidas y convolutadas, su largo equivale á las ?/¿ partes del de las cañas. La ligula es breve y truncada. La panoja, de 8-10 cm. de largo, es compuesta de ramas solitarias ó binarias, formando, hacia cualquier dirección, semivertícilos; las mayores llevan de 3-8 espi- guillas y estas á su vez son de un largo de 14 mm. y compuestas de 8 flores, bastante distantes entre sí. Las glumas y paleas toman hacia el ápice una coloración morada, la gluma inferior es aovada- lanceolada, uninervada y subaquillada, la superior un poco mayor ó sea de 6 mm. de largo, obovado-lanceolada; la palea inferior es quinquenervada, algo áspera y también de un largo de 6 mm. Planta que citamos por primera vez de la R. A., siendo conside- rada como originaria de Chile. 346. Festuca muralis KuntH. Kunth, Syn. pl. aeq.1. 218; Enum. 1.396; Gay, El. chil. vr. 425; F. Phil. Cat. Pl. chil. p. 324; Hieron. Sert. pat. 373 n” 132; Pl. diaph. p. 307; Speg. Prim. chub. 629 n* 213; Macloskie, Exp. pat. p. 236; Syn: Festuca myurus Kth. Nov. gen. 1. 154 (non L.). » » australis Nees ex Gris. Symb. n* 1827, St. n? 18,427 (8. 1. 1908, Santa Rita, Vela, Prov. B.-A. (M. B.). » » 19,393 (10. xn. 1908) Rio IV, Córdoba. » » 19,744 (31. xn. 1908) Santa Rita, Vela, Prov. B.-A. (M. B.). Planta de una altura de 10-20 cm., raíz fibrosa, cañas y vainas lisas. Hojas estrechas, lineares á veces escasamente pilosas. Panoja sencilla, binaria y también alternada. Todas las glumas son lam- piñas, las espiguillas lanceoladas, comprimidas de 5-9 flores, con aristas ásperas, cuya longitud excede la de las glumas fértiles, no- pestañadas. La especie es de consistencia dura y mala forrajera produciéndose con preferencia en terrenos áridos y arcillosos. Su área geográfica es Pat. Chub. B.-A. (por primera vez) E. C. (Chile, Perú). 347. (305b) Festuca Myurus L. (non Ktn.). St. n* 20,467-503 (16. x1r. 1909) Villa Garcia, Tanti, Córdoba. en diversos puntos de la Estancia «Pampa de San Luis», Dep. Cruz del Eje, Sierra de Achala, Prov. Córdoba, 42,000 m. altitud. » » 20,696 (18. x1r. 1909) > » 20,802 (19. x1x. 1909) > > >» 21,089 (22, xar. 1909) | STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 167 348. Festuca ovina Lin. Lin. Spec. pl. ed. p. 73 (1753). var. magellanica (Lam.) Hacker. Hackel, in P. Dusén, Svensk. Exped. till. Magellansld. 11. 228 (1900); Macloskie, Exp. pat. p. 23; Wildeman, «Belgica» p. 50. Syn: Festuca magellanica Lam. Enecycl, 11. 461 (1786) et in TIL. 1, 189; Kunth, Enum. 1. 391; Gay, Fl. chil. vr. 432; F. Phil. Cat. PL. chil. 324; Gris. Pl. lorentz. n* 765; Symb. n* 1,829; Hieron., Pl. diaph. p. 307; Speg., Pl. fueg. p. 95. n* 274; OK. Rev. 111?, 354; Alboff, Fl. als Ey Lx m0:b28. Syn. Festuca erecta D'Urv. var. aristulata Gris. Pl. lorentz. no 165 b. St- n” 18,017 (1. 1. 1901) Cholila, Chubut, Patagonia (N. IL nos, 141, 174, 196, 200). Rizoma fibroso, sus fibras largamente estendidas, filiformes lisas, emitiendo cañas erguidas, simples, lampiñas, algo tiesas, foliosas en su base, de 15-20 cm. de altura. Lígula corta y pestañosa. Hojas siempre rígidas, convolutado- filiformes, pubescentes por el lado superior y lampiñas por el inferior. Panoja subcombada casi uni- lateral, rígida, de 5-7 cm. de largo, subespigada provista de espi- guillas densamente apretadas entre sí. Las espiguillas son dere- chas, ovales de 7-10 mm., siendo cada espiguilla compuesta de 4-5 flores. Glumas desiguales, agudas, la superior uninervada, linear, la inferior tri-nervada, lanceolada de solo la mitad del largo de la espiguilla. Flores esplayadas de un color entre morado-obscuro y olivo, cortamente aristadas, ovario lampiño. El crecimiento de todas sus partes vegetativas es sujeto á gran variabilidad, mien- tras que sus hojas siempre son rígidas. Forraje inferior. Fué citada de Isl. Malv., Tierra del Fuego, Santa Cruz (recién del Chubut), M., Ct., R., S. (Magell. Chile). La especie típica es indicada del hemisfério boreal, Am. sept., Asia y Europa. 349, Festuca purpurascens Bayxks € Sor. Banks 6 Soland Flor. ant. 1. 393; Gay, Fl. chil. 420; F. Phil. Cat. p. 324; Speg. Pl. per Fueg. p. 94 n* 271; Alboff, Fl. rais, Terrefeu xi. n* 531; Macloskie. Exp. pat. p. 239. 168 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. St. n” 18,916 (17. 11. 1901) Río Corcovado, Chubut (N. L n* 139). Grama estolonifera. Cañas de 1 m. de altura, esbeltas, lampiñas, con nudos á largas distancias. Las hojas son por partes planas, acuminadas y más cortas que la caña. Panoja laxa, con rayos alar- gados, hasta el ápice pauciflora. Espiguillas oblongas de 12 mm. de largo, próximamente con 8 flores; glumas estériles de 3 nervios, lanceoladas, la superior triple más larga, flores lampiñas, gluma fértil de 5 nervios, tridentada, diente mediano aristado. De insig- nificante valor forrajero. Ha sido conocida de la Tierra del Fuego, del territorio de Santa Cruz y ahora la citamos del Chubut (Chile). 350. (309b) Festuca sciuroides Rorn. St. n* 19,736 (31. xuz. 1908) Vela, B.-A. (M. B.. 351. (310b) Festuca setifolia Srkubp. var. mutica Hacker. St. n” 17,793 ex Lillo n” 5,661 (5. 11. 1907) Infiernillo, Tafi, Tuc. á 2,800 mm. alt. St. n* 17,794 ex Lillo n* 5,419 (23. 1. 1907) Cuesta del Garraba- tal, Dep. Tafi, Tuc. á 1,800 m. altitud. St. n* 19,834 ex Lillo n* 3,508 (6. 1v. 1904) Cumbre de Malamala, Dep. Tafí, Tuc. á 2,200 m. altitud. Co:mnmpárese lo expuesto en la nota de FP. Hieronymi. 353. (311b) Festuca uninodis Hacks. St. n” 17,792 ex Lillo n* 5,615 (4. 11. 1907) Cumbres Calchaquíes, Dep. Tafi, Tuc. 4 4,200 m. altitud. St. n* 18,832 ex Lillo n* 7,443 (27. 1. 1908) Cerro Muñoz, Dep. Tafi, Tuc. 43,800 m. de altitud. St. n? 19,835 ex Lillo n” 3,085 (3, 1. 1903, Cumbres Calchaquies, Dep. Tafí, Tuc. á 4,000 m. de altitud. forma binodes HackeL nov. forma. St. n? 17,795 ex Lillo n* 5,660 (5. 11. 1907) Pajonales, Infiernillo, Tafi, Tuc, á 2,150 m. de altitud. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 169 Festuca sp. an? nova aff. F. Ulochaetae DorLL. sed mutica exempl. incomplet. St. n” 19,836 ex Lillo n* 8,420 (x1. 1888) Siambon, Tafí, Tuc. Festuca sps. confert. St. Contrib. 11. p. 526. St. n” 18,860 ex Lillo n* 7,964 (26. x11. 1907) La Peñita, Tafi, Tuc. á 2,050 m. St. n* 18,861 ex Lillo ne 1965 (27. x11. 1907) Quebrada Cerro Muñoz, Tafi, Tuc. á 2,600 m. de altitud. Determinación imposible sin comparación. BROMUS DiLL. Ex Lin. 353. (112a, 312 b) Bromus auleticus Trix. St. n* 16,815 (14. 1. 1907) Capilla del Monte, C. (M. E.). » » 17,455 (18. 1v. 1907) Catamarca (M. E.). » » 20,616-32-729; 21,005, 63, 14, 97 y 21,109 (18-22. x11. 1909) varias quebradas de la Est. Pampa, San Luis, Achala, C. 4 2,000 m. 354. Bromus coloratus StEUD. Steudel ad calcem Lechl. Berberid. am. cit.; F. Phil. Cat. Pl. chil. p. 318; Speg. Pl. fueg. p. 98 n* 284; Alboff, Fl. rais., Terrefeu xt, n* 560; Macloskie, Exp. pat. p. 241; Autran, Pl. feu p. 14; Wil- deman, «Belgica» 9. 51. St. n* 18,006 (1. 11. 1901) Rio Corcovado, Chubut, Patagonia (NSE 2157. Grama vigorosa de rizoma leñoso. Cañas unidas á la base, es- triadas, lampiñas. Hojas lanceoladas de 15-30 cm. de largo por 1-4 mm. de ancho, ásperas y filosas. Ligula aovada dentada. Pa- noja de 30 em., con rayos semiverticilados, ásperos, lampiños en su base provista de 1-8 espiguillas. Estas son comprimidas con 5-1 flores, laxamente dispuestas de una coloración de matices en- 170 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. tre violáceo y blanquizco. Las glumas son más cortas que la flor inferior. La gluma fértil es lampiña y cortamente aristada en su extremidad. Forraje regular. Citada antes de la Tierra del Fuego (Chile, Punta Arenas, Estrecho de Magallanes) y la primera vez ahora del Chubut. 355. (313 b) Bromus erectus Hunsox. 356. Bromus hordaceus Lux. Lin. Sp. pl. 1. 77 (1753). Syn: Bromus mollis Lin. spec. ed 2. 1. 112 (1762); Berg, C. Enun. pl. europ. p. 20 n” 139; Hieron. Pl. diaph. 305: Arech. Gram. urug. p. 136 n” 2; Speg. El. vent. p. 15 n* 342; Fl, Tandil, p. 50 n* 357. Syn: Serrafalcus mollis Parl. Fl, ital. 1. 395 (1848) fig. 3. St. n* 17,641 (2. 11. 1907) Nutrias, F.C. S., Prov. B.-A. (M. E.). » » 21073 (20. x11. 1909) Los Cocos, Punilla, Córdoba. » » 21,306 (1. 1. 1910) Vela, EF. C. S., Prov. B.-A. (M. B.). Pajas de 30-S0 cm. de altura, hojas lineares escasas. Panoja am- plia, un tanto flexuosa, con un ámbito de 8-12 cm. Florece tem- prano ó sea de Octubre á Enero. Siendo pasto blando, es buen forrajero en cantidad medida, pero ingerido por los animales en abundancia las provoca vérti- gos y vahidos. De la R. A. ha sido mencionado únicamente de la Prov. B.-A. y recién también de Córdoba; pero, aunque sea considerado como oriundo de Europa, su existencia fué constatada en el Uruguay y en otros paises sudamericanos. var. £. leptostachys Brok. Beck. Fl. v. N. Oestreich. 109 (1890). Syn: Bromus mollis L. f. leptostachys Pers. Syn. 1. 95 (1805). St. n*? 19,734 (31. xt. 1908) Estancia Santa Rita por Vela, F. C. S., Prov. B.-A. (M. B.). Variedad citada por primera vez de la R. A., siendo originaria de Europa. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. E 357. Bromus macranthus MeYex. Meyen, Reise 1. 311; Gay, Flor. chil. vi. 443; F. Phil. Cat. Pl, chil. 318; F. Kurtz, Viaje bot. p. 28; Speg. Prim. Chub. p. 629 n* 216; OK, Rev. 11 ?, 344; Macloskie, Exp. pat. p. 242; Autran, PL feu 9.10. Syn: ? Bromus setifolius Presl. Rel. haenk. 1. 261. St. n* 18,002 (5. 1. 1901) Bolsón, Chubut, Patagonia (N. L n* 16). Plantita anual cespitófera, de raices fibrosas. Pajas decumben- tes, desde su base, rollizas, estriadas, 10-12 cm. de largo, ásperas hasta la vaina y la panoja. Ligula breve, aovada, franjada. Hojas estrechamente lineares, convolutadas, cerdosas, rigidas y peludas. Panoja empobrecida de 1-3 espiguillas, cada una con 6 á 12 flores. Glumas un tanto ásperas, casi desiguales de 3-5 nervios. Gluma fértil ovalada de 9 nervios, áspera, obtusa, la arista subapical nace: en las ?/¿ partes del largo de la espiguilla. Forrajera insignificante. Fué citada de la Tierra del Fuego, de Chubut, de Mendoza (Chile, México ? ). 358. Bromus (FestucoIDEs) obtusiflorus HackeL nov. spec. Stuckert, Herb. arg. n* 18,021 (20. 1. 1901) Río Corcovado, Chu- but, Patagonia, leg. Dr. Nicolás Illin, n* 169. Perennis. Culmus erectus, 20-30 cm. altus, teres, glaberrimus, ad. apicem usque foliatus, plurinodis. Vaginae arctae, terretiusculae, integrae, reflexo - puberulae ». glabrae, internodiis longiores, emortuae fuscae in fibras dis- cedentes. Laminae lineares, sensim acutatae, planae, ad 16 cm. lony., 6 mm. lat., rigidulae, virides, subtus glaberrimae, supra pilis brevibus conspersae v. glabrescentes, infimae utrique pilosae, margine laeves tenuinerves. Panicula ovata, laxa, ad 16 cm. long., rhachi laevi, ramis sin- gulis v. binis elongatis (inferioribus circ. 8 cm. longis) subca- pillaribus scabris, a *], inferiore divisis, ramulis secundariis 1 -2-spiculatis, spiculis plurimis longiuscule, subterminalibus breviter pedicellatis. Spiculae lineari - lanceolatue, laxiuscule 4-5- flores, circ. 20 mm. long., 3 - 4mm. lat., pallide viridis. 172 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Gluma I. anguste lanceolata acuta 1 -nervis, carina obtusa sca- bra, dimidium florem contiguam aequans, 7 mm. long. IT. circ. 11 mm. long., late lanceolata, acutiuscula, 3-nervis, carina scabra. Glumae fertiles late lanceolatae, apice rotundato-obtusae, 13 mm. long., (-nerves, ad nervos prominentes in *l, inferiore ci- liolato-scabrae, inter nervos hispidulae, in */¿ superiore glabrae, ad nervos scabrae, paullo sub apice aristulam rectam 4-5 mm. longam, scabram exserentes, dorso rotundatae vix carinatae. Palea gluma conspicue brevior, oblonga obtusa, carinis setuloso- ciliolata. Species distinctissima, inter austro-americanas glumis fertilibus apice rotundato-obtusis insignis, qua nota. Bromum inermem europaeum moret, qui vero a nostro recedit ligula brevissima truncata; paniculae ramis quinis, spiculis linearibus, aristis brevissimis v. saepius nullis. 359. (113a 314 b) Bromus unioloides (W.) H. B. K. forma typica eleistogama Hackez. St. n” 16,043-89 (216. x. 1906) C. » » 17,454 (18. 1v. 1907) Catamarca (M. E.). » » 19,298 (12, xt. 1908) Capilla del Monte, C. » » 18,112 (16. 1v. 1908) Laguna del Monte, Dep. Marcos Juá- rez, Córd. (M. E.). St. n” 18,784 (16. 1v. 1908) Chelco, Rioja (F. S.). (315 b) forma chasmogama Hacker. subforma achalenis HackeL € StUCKERT nov. subf, St, n* 20,651 (18. x11. 1909) Estancia Pampa de San Luis, Acha- la, Córdoba á 2,000 m. alt. Aun no nos fué posible establecer las diferencias exactas entre la forma típica y la subforma peculiar demacrada. (174 a, 316b) var. brevis (Sreun.) HackeL. St. n* 16,008-062 (13-16. x. 1906) Río 1, Córdoba. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 173 (317 b) var. humilis Desv. (non Speg.) St. n* 17,745 ex Lillo n* 5,503 (29.1. 1907) Cumbres Calchaquies, playas de arroyo, Dep. Tafi, Tuc. á 4,200 m. alt. var. pubescens HackeEL nov. var. Differt a typo, glumis fertilibus pubescentibus. St. n* 19,837 ex Lillo n* 5,470 (24. 1. 1907) Tuc. 360. Bromus valdivianus PhaiLrppr. R. A. Pihilippi in Linnaea xxx. 102. (1857); F. Philippi, Cat. Pl. chil. p. 319. St. n” 18,004 (10. rr. 1901) Nafofo-Cahuello, Chubut, Patagonia (N. I, n* 245). Grama perenne, cespitosa, de cañas erectas de 40-50 cm. de altura, con su parte superior desnuda. Las hojas basales son angos- tas y pilosas, de 15 cm. de largo, por 2-2 */, mm. de ancho; las can- linares son más anchas y ellas, como las vainas, son pronunciada- mente surcadas y lampiñas. La lígula de las hojas superiores es triangular. La panoja es de Y cm. de largo, comprimida y compues- ta de 8-15 espiguillas y éstas son lanceoladas de 17 mm. de largo, de 4-5 flores ásperas y verdes. Las glumas son lanceoladas, nervo- sas, las superiores de Y mm. y las flores agudamente aquilladas. La palea inferior es de 10 mm. de largo, en el ápice cortísima- mente bilobulada, aristada, novenervada. Buena forrajera. Citada por primera vez de la R. A., habiendo sido descrita como habitante de Chile. XII. HORDEAFE. LOLIUM L. 361. (318b) Eolium multiflorum Lan. typicum. St. n* 16,486 (20. xr. 1906) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). » » 16,686 (29. x1r. 1906) Los Cocos, Punilla, C. » » 16,831 (17. 1. 1907) Río IV, C. » » 19,838 ex Lillo n* 6,506 (8. x1.1902) B.-A. 174 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. (319 b) var. muticum DOC. (320b) 362. Lolium perenne L. St. n* 18,389 (1 1. 1908) Los Cocos, Punilla, Córdoba. » » 19,439 (6. x1r. 1908) Villa Maria, Dep. Rio III, C. » +» 21,065-66 (20. x11. 1909) Los Cocos, Punilla, Córdoba. forma anomala HackeL nov. forma 2. Phachi undulata Hacken. St, n* 16,674 (30. x1r. 1906) Las Rosas, por La Falda, F. C. N. OE., Dep. Punilla, Prov. Córdoba á 1,000 m. de altitud. 3. rhachi subundulata HackeL St. n” 19,605 (22. vir. 1908) Los Cocos, Dep. Punilla, Córdoba. En este caso la desviación de la raquis noes constante, ni se presenta en todos los tallos. 363. (321 b) Lolium rigidum Gaup. (322 b) et var. aristatum Hackegn. 364. (323 b) Lolium temulentum Laix. et var. maecrochaeton A. Br. A. Br. Flora xvim. p. 252 (1834). St. n* 18,825 ex Lillo n* 7,115 (13. x. 1907) Tuc. Las cañas con sus vainas se presentan en la parte superior algo ásperas y en la inferior un tanto escabrosas. Las espiguillas tie- nen próximamente de 3-S tlores, pero, si la planta se cría en luga- res áridos el número de flores queda más reducido. Citada por primera vez de la R. A., siendo considerada de origen europeo. LEPTURUS R. Brown 365. Lepturus incurvatus (L. f.) Trxx. Trin, Fund. Agrost. 123. Arechavaleta, Gram. urug. p. 471 n* 2; STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 175 Cristóbal M. Hicken, Notas botánicas in An. Soc. cient. arg. tom. LXV. p. 299 (1908); OK. Rev. n1?, 305. Syn: Aegilops incurvata L. Spec. pl. ed. 2. p. 1490 (1163). » Rottboellia incurvata Lin. f., Cavanilles, Icon. t. 213. » Ophiorus incurvatus Beauv. Agrost. 116 t. 21. £. 3. St. n* 19,156 (17.1x. 1903) Monte Caseros, B.-A. Remitido determinado por el Doctor Cristóbal M. Hicken y confirmada la determinación por el Dr. E. Hackel. Grama cespitosa, pajas de 20-30 cm. de altura, casi siempre recostadas, lisas y lampiñas. Espigas sencillas de forma aleznada y un tanto encorvada. Láminas estrechas y puntiagudas. Presta buenos servicios como forrajera, pero se presenta sólo en poca cantidad, viviendo en terrenos secos y arcillosos. En la KR. A. sólo fué citado de la Prov. de B.-A., pero su existencia queda constata- da del Uruguay y Brasil, Europa, Africa y del Oriente. AGROPYRUM GaERTN. 366. Agropyrum repens P. Brauv. var. marilimum (Kocn 4 Z1z.) HackEL nov. nom. Syn: Triticuam repens L. var. maritimum Koch « Ziz., Cat. plant. Palat. 5 (1814). St. n” 18,322 (18. x11. 1904) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). La variedad difiere del tipo por sus hojas esplayadas, cerdosas, convolutadas, á pesar que la determinación no cs absolutamente segura por ser el ejemplar algo manco. La citamos por primera vez de la KR. A., siendo originaria del centro de Europa. La típica como las variedades son excelentes forrajeras. (178 a, 8324 b) var. secabrifolium Dornz. var. scabriglume HackeL nov. var. Differt a typo glumis sterilibus et fertilibus punctis elevatis vel (in carina) aculeolis scabris fertilibus subulato-aristulatis. St. n* 17,746 ex Lillo n* 4,952 (22. 1. 1906) Maimará, Jujuy, á 2,200 m. altitud. 176 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. (117 a, 325 b) var. vulgare DorLz. St. n” 16,499 (3. x11. 1906) Córdoba. » » 19,480 (18. xtr. 1908) Colonia Benites, Chaco (N. R. A.). SECALE TourN. Ex LiN. 367. Secale cereale Lux. Lin. spec. 124; Hieron, Pl. diaph. p. 312; Speg. Fl, vent. p. 77 n* 3471; Arech. Gram. urug. 453 n” 1. N. y. Centeno (Arg. « Esp.) Centeio (Bras.). St. no 17,384 (20. 111. 1907) Coronel Suárez, F. C.S., B.-A. (M. E.). » » 17,960 (15. xt. 1907) Marcos Juárez, Córdoba. » » 19,437 (10, x1r. 1908) al lado de las veredas en Rio IV, Córdoba. Esta especie es cultivada en regular escala en el país y las mues- tras á la vista evidentemente proceden de granos extraviados por colonos. Ella es originaria del Sud de Enropa, cultivada en escala grandisima y considerada, á la par del trigo, como el cereal más empleado y mas útil. Según datos oficiales en 1908 fueron cultivados en la Prov. de Córdoba con centeno 2,308 hectáreas y en toda la República 94,436 hectáreas. TRITICUM L. 368. (331b) Triticum durum Desr. 369. Triticum vulgare ViLLars. Villars, Flore du Dauph. 11. 154; Hieron. Plant. diaph. p. 310; Arech, Gram, urug. p. 461 n” 1. Syn: Triticum sativum Lamark. N. v. Trigo, Tr. blanco, Tr. común, Tr. inglés, Tr. de invierno. var. typicum St. n” 21,429 (15. xt. 1909) espontáneo 6 escapado de la cultu- ra en la proximidad de Córdoba. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 1 =] var. albidum ALkerELD. Alefeld, landwirthsch. Flora p. 329 (1866). St. n* 18,471 (17. 1. 1905) Cercanias de Córdoba. Pajas glumales sin aristas. Espiga y fruto blanquizcos. Fre- cuentemente cultivado en la Europa central (4 B.-A.). ar. erythrospermum KorrNIckKE. Koernickein Koerner € Werner, Handbuch des Getreidebaus, 1.46. N. v. Trigo del Banato (Banda ó distrito de Croacia). St. n.* 18,470 (17. 1. 1908) Cercanías de Córdoba. Pajas glumales aristadas. Espiga blanquizca, fruto rojizo. Cultivado en mayor escala, particularmente en la Austria-Hun- gría. Ambas variedades citadas proceden seguramente de plantas extraviadas de la cultura. La última variedad es más adecuada para ser sembrada en el pais, por soportar mejor alguna época de seca. La descripción botánica suscinta del trigo es la siguiente: Raices fibrosas. Pajas simples erguidas de SO-150 cm. de altura, casi siempre solitarias. Hojas planas lineares, acabando en punta aguda, siendo su faz superior algo áspera ó aun lisa. Vaina foliar estriada. Lignla membranosa. Espiga terminal de 10-15 cm. de largo, tetrágona, robusta, erecta ó algo cabisbaja. Espiguillas em- pizarradas, ventrudas, alterno-solitarias. A la par de la especie típica y sus variedades aquí referidas, encuéntranse cultivadas en el país con bastante generalidad las dos siguientes variedades: var. aestivum Kra. Enum. 1. p. 435 y var. hypernum Kru. l. c. A más de la especie común 7. vulgare Vill. y la del 7. durum. Desf., ya citado, se cultivan en nuestros suelos, como también en otra parte, las siguientes otras especies á saber: Tr. spelta L. (Espelta, Escaña, Escanda) Tr. amylum Sér.; Tr. turgidum L., (Trigo moreno ó macho) Tr. monococcum L.; Pr. pc- lonicum L. (Trigo polaco ó de Jerusalém) y una serie de formas y varidades de éstas. Se aplica á ellos y los anteriormente nombra- dos una multitud de denominaciones á veces por causa de insigni- ANAL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. x1v. AbriL 4, 1911. 12 178 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. ficantes diferencias Ó apreciaciones de rendimiento como ser: Tr. candeal. Tr. morocho, Tr. barleta, redondel, redondillo, barri- gudo, etc. Compréndase por Trigo guacho, plantas de cualquier variedad de Triticum vulgare Vill. y aun de otras especies de Triticum, que sin haber sido sembrado, se produjeron espontáneamente de las semillas, que cayeron de antaño sobre el terreno al recoger la cosecha. Es natural que el nacimiento de estas plantas tenia que ser más precoz, que el de las sembradas y sus cañas resultan más robustas y macolladas. El Trigo barleta produce un grano más corto, lleno y redondeado, mientras el del Trigo candeal es más largo y relativamente más angosto, de color amarillento; el del trigo llamado Costa es menos largo, pero de color más parduzco. La patria del trigo no ha podido ser averiguada en absoluto, á pesar de que varios autores afirman ser la Palestina; pero sea como fuera, un hecho queda constatado y el es, que por las conti- nuas culturas desde épocas remotas, se ha llegado en la actual á un gran perfeccionamiento de las diferentes especies, ellas perte- necen á las plantas más antiguamente cultivadas, siendo que ya los griegos consideraban sus semillas como el mejor grano para pan. Queda fuera de toda duda, que el trigo es el cereal más importante del mundo y su cultivo se efectúa en extensiones superlativas en ambos hemisferios. El trigo exige para su cultivo un terreno humifero y una tem- peratura mediana veranal de +- 14” C. Su cultura se extiende en Europa al Norte por la Noruega hasta el grado 64, en Rusia hasta el de 60; en los Alpes su cultura se eleva á una altitud de 1,100 m., en la América del Sud á mucho mayor altitud, encontrándosela hoy en día extendido por toda la zona templada y subtropical del mundo antiguo y nuevo. De los granos del trigo se obtiene (4 la par del afrecho y pro- ductos secundarios) la harina más fina y más blanca de todos los cereales, ella es empleada para la elaboración de toda clase de panes y de otras especialidades alimenticias. Los granos de trigo son amás, entre todos los cereales, aquellos que contienen en ma- yor proporción (13 %,) substancias albuminosas y forman por esta causa también un factor importante en la nutrición del hombre y del animal. Los granos de trigo, sometidos á diferentes manipu- laciones pueden dar origen á una multitud de preparados para ser empleados en la cocina doméstica. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 179 También pueden ser tratados, como los de la cebada, para Malta y ésta á su vez usado para la fabricación de la cerveza ú destilado para obtener aguardiente. De la harina puede extraerse el almidón de trigo, contenido en ella en la proporción de un 60 0/,. El almidón es usado en muchas industrias, en nuestro menaje y nuestra cocina, como asimismo en el planchado de ropa. Las cañas maduras de trigo, principal- mente las de ciertas variedades de largas aristas son empleadas para la fabricación de sombreros de paja y para otros tejidos los más finos y delicados; esta clase de paja es llamada Paja de Tos- cana 6 de Florencia. La paja común puede ser utilizada para re- costadero de los animales domésticos en los establos y en la fabri- cación de papel. El pais considerado, hace un decenio, como de mayor producción de trigo en Europa ha sido él de Austria-Hun- gría y ella exportaba la mayoría de su producto, pero paulatina- mente esta supremacia no sólo fué alcanzada, sino sobrepasada por Rusia y Francia y por ultramar en los últimos tiempos, por las enormes sementeras en los Estados-Unidos de N. A. La pro- ducción de éstos, sobrepujó en cantidad á todos los demás paises productores, siguiéndolo en cuanto á producción cuantitativa tam- bién las Indias orientales. De manera, que la producción norteamericana, es la que ejerce por su sensible concurrencia, una influencia marcada sobre la pro- ducción y precio de los trigos europeos, indios y argentinos, do- minando el mercado del artículo. Según datos oficiales la producción mundial de trigo es término medio anual de 86.000,000 toneladas. La mitad de esta cantidad de producción corresponde á los tres paises siguientes: Estados-Unidos de ÑN. A.............. 18.000,000 toneladas DU ios ad 14.500,000 > IES o O SEO 9.200,000 » 41.700,000 toneladas A otros paises corresponde la producción siguiente: nda Omentales eto iao 8.500,000 toneladas Austria Hunan leerlos 3.000 000 > MA 4.500,000 » ESPA lo e Ein arena e leara feeds 3.250,000 » notte debe st titan 1.500,000 » Manos IO tros. sae aia 3.950,000 > 180 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Otros países más, también son productores y exportadores, pu- diendo distribuirse término medio la producción y exportación relativa de algunos de la manera siguiente: Canadá produjo........-...- 2.500,000 ton. y exportó 1908.... 1.100,000 ton. Estados de los Balcanes prod. 5.000,000 » » » > IRE GAD000N > Australasia produjo......... 1.800,000 » >» » » .... 400,000 » La República Argentina con un área de 6.063,100 hectáreas sem- brado en 1908 con trigo tuvo una cosecha de 5.239,000 toneladas. Haciendo un cálculo proporcional se desprende, que la Repú- blica Argentina alcanzó á la par de Austria-Hungría, en cuanto á producción cuantitativa á ocupar el quinto rango como país pro- ductor de trigo, correspondiéndole así el 6,2 /, de la cosecha uni- versal, dejando, como expusimos antes, los primeros cuatro rangos á los Estados Unidos de Norte América, Rusia, Francia y las In- dias orientales. El año siguiente, ó sea desde el 1.2 de Agosto de 1908 al 31 de Julio be 1909, sembróse en la Argentina un área de 5,836,550 hectáreas con trigo, los que produjeron un total de 4,250,000 to- neladas. de cuya cantidad se exportó 2.950,000 toneladas de trigo y harina, ocupando por primera vez el más alto lugar como país exportador, contribuyendo á la provisión de las necesidades mun- diales con un 23 Y,. La siguieron inmediatamente los Estados Unidos de Norte América con un 22 %/,; y luego siguió Rusia con un 20 0/,, mientras que, los demás paises contados en conjunto, es decir: Canadá, Australia, India, Estados Balcánicos, etc., abaste- cieron el 35 0/, restante. HORDEUM L. 370. (326 b) Hordeum comosum PresL. St. n? 13,31419,086 (vi. 1903) Rio Gallegos, Territorio Santa Cruz (E. C.). St. n* 19,839 ex Lillo n” 4,949 (23. 1. 1906) Maimará, Prov. Jujuy. 371. (330 b) Hordeum distichum Lax. 372. Hordeum jubatum Lan. Lin. Spec. 126; Hieron. Pl. diaph. p. 314; Ball, J., Fl. pat. 1. 237; Speg. Pl. pat. austr. p. 583 n” 431; OK. Rev. 111?, 355; Alboff, N., STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 181 F]. rais. Terrefeu p. 9. 10. 13, Macloskie, Exp. pat. 249; Wildeman, «Bélgica» p. 54; Rendle, Prichards Pat. pl. p. 324. St. n* 17,457 (15. 11. 1907) Estancia Chapad-Malal, Mar del Plata, Prov. B.-A. (M. E.). Especie de cebada, la que en poco se diferencia de otras indige- nas, suministrando como aquéllas un excelente sustento para las haciendas. Conocida desde la Tierra del Fuego por toda la Patagonia hasta la Prov. B.-A. 373. (331 b) Hordeum murinum Lay. subsp. leporinum Rich. St, n* 17,494 (15. 11. 1907) Coronel Vidal, F. C. S., B.-A. (M. E... » » 17,638-39 (6. 11. 1907) Nutrias, F.C. $., B.-A. (M. E.). » » 19,263 (9. xr. 1908) Vela, F. C. S. B.-A.(M. B.). » » 19,841 ex Lillo n” 8,028 (16. xr. 1903) B.-A. » » 21,301 (1. 1. 1910) Vela, F. C.S., B.-A. (M. B.). 374. (332 b) Hordeum pusillum Nurr. 375. (333 b) Hordeum secalinun ScHrep. var. parviflorum Hacker. 376. Hordeum stenostachys Gor. Godr. Flor. Juven, 47 (1853). St. n* 19,840 ex Lillo n* 6,508 (10. x. 1902) B.-A. » » 21,096 (20. xtr. 1909) Los Cocos, Punilla, Córdoba. » » 21,300 (1. 1. 1910) Vela, F. C. S., B-A. (M. B.). (119 a, 327 b) Syn: Hordeum compresum Gris. Pl. lor. n% 759; Symb. n* 1,314; St. Contrib. 1. Gram. arg. in An. Mus. Nac. B.-A. t, XI. p. 431 n* 327 (328 b) var. Ssuperatum (HackeL) STUCckERT. (329 b) var. tenuispicatum (HackeL € STUCKERT) STUCKERT. 3717. (329 b) Hordeum vulgare L. Lin. Spec. 125; Hieron. Plant. diaph. p. 313; Speg. Pl. Pat, austr. p. 588 n” 429; Arech. Gram. urug. p. 475 n” 2. 182 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. N. v. Cebada común. St. n” 16,103 (30. x. 1906) Alrededores de Córdoba, escapada de la cultura. Planta vigorosa con cañas erectas, lisas de 40-80 cm. de altura. Vainas foliares abiertas, flojas y lampiñas, Liígula breve, trunca. Láminas planas, ásperas por ambos lados. Espigas robustas, er- guidas, á veces cabizbajas. Espignillas cerradamente apretadas, en su mayoría fértiles, todas aristadas, con aristas rectas, largas y esplayadas. En estado verde es un excelente forraje de engorde para toda clase de hacienda y sus granos se emplean para alimen- tación de hombre y de animal. Fué citada como cultivada en B.-A., E., Sf., €. (Urug., Europa, Oriente). Se cultivan en el país fuera de esta especie, que es la más común, el Hordeum distichum L. Cebada ladilla, C. de dos carreras, Ordia- te; el Hordeum hexastichum L., C. ramosa; el Hordeum zeocitron L., C. de abanico. Mientras que el conocimiento y la cultura del centeno data de tiempos más recientes, la cebada era conocida y cultivada desde las más remotas épocas y en casi todas partes del mundo. Ella se halla mencionada en el Deuteronomio, en el libro de Rut, en el del profeta Isaías y en el de Ezequiel. Dicese que fué Isis, divinidad egipcia, quien descubrió este cereal en las márgenes del Nilo, Plu- tarco menciona la cebada como uno de los primeros cereales, de los cuales los hombres han hecho uso para su alimentación, de modo que existen pruebas inequivocas, que los egipcios y los hebreos la cultivaron ya. En la antigua Grecia se ofreció la cebada á los Dio- ses, siendo según el historiador Plinio el cereal más antiguo cultivado por los griegos, y los romanos cultivaban la cebada como planta alimenticia y fabricaban con la harina de sus granos un pan que les servía de alimento exclusivo, pero su uso fué abando- nado en el tiempo de los emperadores y reducido su empleo única- mente para criados y sirvientes. Después se discernió como recom- pensa un pan de cebada á aquellos que habían ganado un premio en los juegos olímpicos, pero más tarde, el tener que aceptar pan de cebada fué considerado, como un acto de humillación. Berosi dice,que la cebada se encontró en estado silvestre en las márgenes del Eufrates en la época de los caldeos, y el botánico Kunth es de opinión, que ella sea oriunda de la Tartaria y de la Sicilia, adhirién- dose á su parecer la mayoría de los otros botánicos. En un libro de la China, encuéntrase mencionado que la cebada STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 183 fué cultivada en aquel país desde unos 20 siglos antes de la era cristiana, pero su comprobación es difícil, mientras que, lo que es seguro y exacto, es que la cebada ya fué cultivada desde muchos siglos atrás por los egipcios, griegos y romanos, sin que se pueda garantir á punto fijo el origen absoluto de ella. Todos los climas favorecen su cultura, siempre que no sean demasiado húmedos ó frios, exigiendo una temperatura de un tér- mino medio entre + 18% y + 21” C. y un terreno ligeramente húmedo y fértil. La cebada llega á madurar en regiones frígidas hasta con un calor de verano, que no baja de +8” C., por cuya razón es im" putada como el cereal más boreal. Enel Asia se la cultiva desde el grado 45-10, en Norte América y Australia pasa otro tanto. En los Alpes la región de su cultura alcanza á una altitud de 1,000 m.; en la América del Sur hasta á la de 3,000 m. y en el Himalaya toda- via se la encuentra á 4,300 m. La aplicación y la utilidad de la cebada son múltiples. Aparte de la obtención de la harina de sus granos (cuya calidad no puede competir en cuanto á su finura, gusto y blancura con la del trigo), su poder alimenticio no queda muy detrás del del trigo. Mas aún, para la nutrición de individuos atacados de ciertas enfermedades, como Diabetes, etc., panes elaborados con harina de cebada ó de centeno son preferibles, Obtienese con la cebada, por provocación del proceso de la ger- minación —el malta, el que, asociado al fermento del lúpulo, cons- tituye la base en la fabricación de la cerveza. Por otra parte, las diferentes preparaciones emanadas del malta se emplean á menudo como medicamentos en numerosas afecciones pulmonares y como reconstituyente. Por la destilación del malta puede obtenerse un aguardiente; y ya desde la antigitedad y de muchas maneras, los egipcios, los tracios, los griegos, los galos y los germanos preparaban bebidas alcohó- licas de la cebada. Muy generalizado es hoy el uso de sus granos como alimento, expendiéndose éstos, después de someterlos á ciertas manipulacio- nes, bajo muchos nombres y formas: cebada pelada, perlada, que- brajeada, sémola y otros, y con estos diferentes preparados el artista culinario compone infinitos manjares. Clasificada la cebada como medicamento, sus cocimientos tomados al interior gozan de gran fama como disolventes, calmantes, diuréticos y alimenticios y pueden ser tomados hasta por niños de pecho. 184 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Referente á la producción, consumo y exportación de los granos de cebada en la R. A. en el día de hoy, pudimos recoger los siguien- tes datos oficiales: Fueron cultivadas en 1908 con cebada en la Prov. de Córdoba la superficie de 6,598 hectáreas y en toda la república la friolera de una superficie de 93,689 hectáreas que produjeron un total de 20,000 toneladas. ELYMUS Lin. 378. Elymus andinus Trix Trin. in Linnaea x. 305; Gram. Poepp. (1835); Gay, Fl. chil. vz. p. 464, F. Phil. Cat. Pl. chil. p. 323; Speg. Pl. pat. austr. p. 588, n*436; Macloskie, Exp. pat. p. 253. St. n* 18,018 (1. 1. 1901) Cholila, Chubut (N. 1, n* 260 sub eo nomine). Esta grama se distingue por sus cañas delgadas, erectas de 30-40 em. de altura. Hojas estrechas, escasamente pilosas. Ligula breve, truncada. Inflorescencia espiciforme, estrechamente linear de 5-12 em. de largo, las junturas de la raquis son planas en la faz superior; obtusamente cuadranguladas y miden en la base de la im- florescencia de 6-10 mm. de largo. Las espiguillas se presentan siempre de á pares y son de 10 mm. de largo y se componen de 2-3 flores una de las cuales es esteril. Glumas lineares trinervadas, acu- minadas, aristadas, más cortas que la espiguilla. La palea de la flor inferior es subigual y estrecha de 8 mm. de largo. La última de la gluma fértil mide, inclusa su arista, 12-22 mm. Fué citada de la Patagonia austral, Lago argentino, Territ. Santa Cruz y ahora recién del Chubut (Chile). var. proliferus Sprc. St. n” 18,019 cum praecedente (n” 133, sub eo nomine). No habiéndose podido obtener la tal publicación de esta varie- dad, su compulsión es imposible. 379. Elymus gracilis Pu:L1ep1 ? vel aff. R. A. Philippi in Linneaea xxxm1. p. 301 (1864); F. Philipp1, Cat, Pl. chil. p. 323. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 185 St. n* 17,976 (26. 11. 1901) Río Corcovado, Chubut, Patagonia, (N. L n* 49, nunquam Elymus chubutensis Speg.). Por escasez de material la determinación de la muestra no es absolutamente segura. Cañas esbeltas de 60-80 cm. de altura, la parte superior desguar- necida, hojas lampiñas, planas de 5 mm. de ancho. Lígula breve truncada. Espiga verde y delgada de unos 10-12 cm. de largo. Citada por primera vez de la R. A., habiendo sido descrita como originaria de Chile. 186 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. CATEGORÍA Il Enumeración de especies observadas en provincias para las cuales aun no fueron indicadas. Ahora. Antes. Agropyrum repens (L.) P. B. y. valgaro. Dodll/ 27.02... Ch. BA. C. E. Mis. (Ext.). Agrostis montevidens. Spr. v. submutica Doell.........»-> Chub. Tuc, Agrostis pulchella Kth. gen..| BA. an? cult. Tuc. Andropogon consanguin, Kth. A A E RN. BA, E. Sl. C. Andropogon contortus L. typ.| Ch. C. R, (Ext.) » » V. S0- Pis 1 A AN E R. Ch. C. Andropogon nutans L. v. agrostoides (Sp.) H....... » L-Gk, Andropogon nutans L, v. pe- E e Sf. Ch. BA. C Andropogon paniculatus Kth.| R, Ch. Form. E. C. Ct, T. $, (Ext.) » saccharoides Sw. v. barbinodis (Lag.) H.....| R e Y Andropogon saccharoides v. imperatoides H........... T. Form 0 Andropogon saccharoides v. laguroides (DC.) H....... T. Form. C. Andropogon saccharoides ssp. leucopog. (Nees) H. typ....| BA. RN. C. Andropogon saccharoides ssp. leucop. sv. perforat.(Trin.) H.| R. $, Sí. C. (Ext.) Andropogon selloanus Hack. .| Ch. C. » sorghum Brot, ssp. haleponsis (LI) El... 5 aos R. C. Andropogon tener Kth...... Es C. Aristida Adsc. L. v. arg. H...| Ch. C, » » v. caerulescens IAE a R, Ct, Chu de STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 187 Aristida Adsc. v. caerulescens am condensata E... toos Aristida mendocina Phil..... Aristida pallens Cav. gen.... Arundo Donax L Bouteloua aristidoides (H. B. E A a chx.) Bouteloua multiseta Gris.... Bromus aulecticus Trin...... Bromus unioloides (W.)H.B.K. emails Desvio is Calamagrostis montevidensis Nees Cenchrus myosuroides H.B.K. Chloris ciliata Sw... Chloris distichophylla Lag. AA RS E Chloris polydactyla Sw. bre- Nianist paucirad... ms... Chloris virgata SW.......-.- Cortaderia dioica (Spr.) Speg. Cynodon Dactylon (L.) Pers... Dactyloctenium aegyptium INES RicOtt ta Diplachne carinata (Grris.) Ha- Diplachne dubia (H. B. XK.) A Diplachne fusca (L.) P.B.... » latifolia (Gris) Ha- Ahora. Antes. 15% (e RN. R. Sgo. M.C Ch. C. R. Form. BA. C. (Ext.) E SO 0h TS: di C. E. Ct, S. (Ext.) 4 Da RN. BA. E.C. Sf Ct. BA. C. dd M. C. (Ext.) Ch. Form. RN. BA. C.T. C: 10 Tuc. R. Sgo. Ch. C, T. 8. C. Mis, (E0x4.) ER. Ct. Ch: 0 les Sf. C. (Ext.) Ch. C. EN Sl. C. Ct. T. $. (Ext.) Form. BA.C. R. Ch. BA. C. (Ext.) ENS T. S. (Ext.) BA. SI. C. Form. (Ext.) Form. 0 ET: C. (Ext.) BA.R.Ct.Ch.Form| C. T. (Ext.) Distichlisscoparia(Kth)Arech. BA. » spicata (L.) Greene..| Jujuy. C. T. S. Form. (Ext.) BA. C. Sf. M. C. BA. C. S£ 188 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Eleusine indica (L.) Gaertn..: » tristachya Kth..... Elionurus candidus (Trin) Ha- O RA OCT A DA MA ARA Eragrostis lugens Nees...... 2 >» subsp. flac- cda (Linda) E. Eragrostis Neesii Trin » —— pilosa (L.) P. B...| » retinens Hackel « A A o JAM | Eragrostis virescens (Kth.,) E e AR Eriochloa montevidensis Gris. > » f. sub- COCA o a Gymnopogon spicatus (Spr.) A A A do Hordeum comosum Presl.... » murinum L. ssp. le- POE OA A a Leptochloa mucronata Kth... >» virgata (L.) e. Te Lolium multiflorum Lam. typ. Luziola leiocarpa Lindm.... Melica argyrea Hackel...... SS. "UR OA is | Microchloa indica (L.) OK. ... Muehlenbergia diffusa W... » nardifolia Gris. Munroa benthamiana Hackel . Oplismenus compos. (L.) P. B. v. loliac, (Lam.) H........ Panicum colonum L.. ...... | Panicum crus galli L. typicum. | Ahora. Antes. Form. Sf. Form. Sgo. 1.0: 0h. Form. BA. BA. C. R. $. R. Ch. Ch. BA. Ins.' Malv. BA. C. Ct. Ch. Ch. R ¡| BA. Sf. BA. BA. an? cult, die R. R, Ct. BA. €. Ct, T..S.. E. ¿Mie (Ext.) C. E. S£. T. Ext.) RN. BA. Sf. C.T. O. (Ext.) E. Corr. (Ext.) RN.BA.C. Ct.R.T.(Ext.) O: T. E. Corr. (Ext.) BA. $. (Ext.) O (Ext.) K, C. T. Corr. Mis. (Ext.) ue oy . C. (Ext.) e dde E. , C. T. Corr. F. (Ext.) Sy 53 E Pat. BA. C. E. (Ext.) 0. 0t, T. 8, (Ext) | T. (Ext.) ca .E. T.S. E. Mis. (Ext.) STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 189 Antes. Panicum crus galli L. v. brevi- Set WDoell. 00 vea ados BA. R C. (Ext.) Panium crus galli L. v. sabu- licola Dosll.... stos Form. C. E, T. Corr. Mis. Panicum divaricatum L..... Ch. Form. S. Mis, Panicum insulare (L.) Mey, A e IA Ct. Form. CT. Panicum insulare (L.) Mey, v. pomiculio (Sp) Ho. oa... Panicum insulare (L.) Mey, v. tenerrimum (Kth.)H...... Panicum milioides Nees..... » Imonostachyum H.B.K.| » sanguinaleL. y. digitat. AT E Panicum spectabile Nees. typ.' Panicum spectabile Nees. v. AA Panicum velutinosum Nees. ...| Pappophorum alopecnroideum VA AN A Pappophorum mucronulatum AA Paspalum dilatatum Poir.... » distichum lo » » 2 EVE Digi- taria backed. Paspalum Larrañagai Arech. » malacophylluam Tr, lomo pa blo a cub bds: Paspalum notatum Fluegge. . Paspalum plicatulum Michx.. » scoparium Fluegge. Phalaris angusta Nees....... Pharus glaber H. B. K...... Phragmites communis (L.) Trin Piptochaetium ovatum Desv.. Ct. BARS BA. Ch. Form. Sgo. BA. Ch. EAS BA. R. R. Ch. Form. ES. Ct. Ch. Form. Ch. BA. Ch. Ch. Form. E iaa Chub. R. Juj. Ch. C. T. Ch. Mis. (Ext. C. T. Mis. (Ext.) Cn GC Ml Sup) Form. Ext.) 0: C. (Ext.) MICIOHUT.S: CATS (Xt) EN BAM EDO DT: Corr. Mis. (Ext.) E Q ad dl Q CAT BASE. 0. E. Ct. Sgo. Corr. Mis. (Ext.) BA.E,C.Corr. Mis.(Ext.) C..S£ E. Corr. (Ext.) Chub. E. C. E DA Pat. BA. E. C. (Ext.) BASE 0. T. 190 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Ahora. Antes. Poa bonariensis (Lam.) Kth .| Ch. BA Ss Os, E: Polypogon interruptus H.B.K. y. ermitas (Er. Bo. . | Chub, M. C. (Ext.) Polypogon monspeliensis (L.) Destaco cc be du Pat. BA. M.Sj.C.R.(Ext.) Rottboellia compressa L. f. y. fasciculat. (Lam.) H....... BA. Form CO. E. T..(Ext) Setaria gracilis H.B.K...... Form. BA. C T. (1x4. f. breviseta H. | BA. >» » » » var. purpu-| rage PEL E RE >. peu Setaria macrostachya H.B.K.| Form Setaria Onurus (W.) Gris....| Form Setaria penicillata Presl.....| BA. Stipa Ichu (R. € P.) Kth....| Ct. » neesiana Tr. « Rupr.f.| COMbOrÍA E o in E Ch. Stipa pampagrandensis Speg. BA. » tenuissima Tr. v. curu- A PA C. Sporobolus argutus (Nees.) A BA,R.Sgo. Form. Sporobolus argutus v. tuber- AO E da o 1% Sporobolus asperifolius Nees. A ni iz iia da C. Trichloris mendocina (Phil.) A E o Form. Trichloris pluriflora Fourn. RES OS BA, Ct, R. Triodia paraguayensis (OK.) ES A A RN A | Triodia pilosa (Buck!.) Elmer- A E: C. C (16. T..(5x5.) | BA. E.C. T. (Ext.) C. T. (Ext.) M. C. (Ext.) C. Di ba E E Pat. RN. BA. M. Sj. R. (Ext.) Pat. — $. O, T. S, (Ext.) C, (Ext.) Pat. M. Sj. C. R. (Ext.). STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. CATEGORÍA IL 191 Novedades para la 3.* contribución. Citada Variedades y Ahora Antes Agrostis montevidensis Spr. var. aristata Doell....... BA. ER. Urug. Gymnopogon spicatus (Spr.) OK. var. pluriflorus Doell.| C. ER. Panicum rivulare Trin. var. grumosum (Nees.) H...... Ch. BA. E. Corr. Mis. (Br.) Pappophorum «mucronul. N. var. vaginatum (Phil.) H..| Rioja. Mend. Paspalum malacophyllum Tr. var. linearifolium H...... Ch. Form. (Parag.). Stipa caespitosa (Gris.) Speg. var. elata (Speg.) H....... Tuc. Salt. Juj. Stipa neesiana Tr. « Rupr. var. aspidula (Sp) Ho... .. Tuc, RN. Salta. Stipa plumosa Tr. € Rupr. var. JRACIS POS << 0. omes ue: Salta. Especies Agrostis exarata Trin....... Chub. Fueg. Pat. austr. (Ext.). » Hackelii Fries.typ.. Tuc. Jujuy. » hygrometrica Nees..| Tuc. BAG (UE). » montevidensis Spr...| C. BA. Urug.). Aira caryophyllea L.........| Chub. Bat (to: Alopecurus antarcticas Vahl.| Tuc. Pat. (Chile). » aristulatus Michx. BA. BA. (Am. bor.). » geniculatus L....| BA. Pat. (Am. bor. Europ.) Anthaenantia lanata Benth...| Ct. Ch. RNCBA., EyiSt O. E. Corr. Form. Mis, (Ext.) Antoxanthum odoratum L...| €. Fueg. Pat. (Eur.). Aristida Spegazzinii Arech. EE A a A cs BA. (Ext.). Arundinella hispida (W.) OK.| Ch. E. (Urug. Parag. Bras.) typ. 192 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Especies -—= Ahora Atropis argentinensis Hack dl: IV ME forma: Mend.Córd. Brisa erecta Damos. a: » glomerata Hackel € O. A Briza subaristata Lam.. -| C. S£, Chaco. Bromus coloratus Stend...... ¡| Chubut. > hordaceos busto, | BA. Bromus macranthus Meyen. | Chub. Calamagrostis nardifolia Gris.| Tuc. » neglecta (Ehrh.) E O A ¡| Chub. Calamagrostis patagónic al (Bra) Mal: ds | Chub. Cenchrus echinatus L........ Tuc. Cor lares dra res Tuc. Cortaderia pilosa (D”Urv.) ERAS - Ma o de Chub. Danthonia cirrata Hackel « A a tas aos | BA. Deschampsia aciphylla (Pr.) A le io Chub. » antarctica Hook.f. Sta. Cruz. » caespitosa P. B.| Chub. Diplachne fascicularis P, B.. Chaco, » mendocina (Phil.) DAA. AI A Córdoba. Elymus andinus Trin........ Chub. Eragrostis hypnoides,B. S. P. Chaco. Eriochloa punctata Ham..... Ct. Tuc. Festuca chubutensis Speg....| Chub, > Commersonii Franch. Chub. » muralis Kth.........| Cbub, BA. » ovina L.v. magell. ..| Chub. » purpurascens B. y S..| Chub. Hordeum jubatum L......... BA. Citada Antes tip. Jujuy. BA. (Ext.). BA. (Ext.). Pat. B-A. (Urug. Bras.) Fueg. Pat. (Ext.). BA. (Ext.). Fueg. Chub. M. (Ext.). | Córd. Fueg. Sta. Cruz (Ext.). | Chub. BA. ER. C. T. (Ext.) Mis. (Bras.). Pat. austr., Malvin. ¡| BA. (Urug.). Fueg. Sta. Cruz (Ext.). Fueg. Sta. Cruz, Chub. M. (Ext.). Sta. Cruz (Ext.). Tue, ? Pat. BA. M. R. Cf. Chile. | BA. Mis. (Ur. Br.). BA. C. Form. Chub. Fueg. Sta. Cruz. Pat. E. C, (Chile). Fueg. Sta. C. M. C. Ct. BE. Fueg. Sta. Cruz. Fueg. Pat BA. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 193 Especies Ahora Cottea pappophoroides Kth.. Hordeum stenostachys Godr.. » a A Imperata brasiliensis Trin.... a Feyindrica BP. Bi. >. Koeleria Bergii Hieron...... Lepturus incurvatus Trin.... Melica papilionacea L....... Monanthochloé littoralis En- Muehlenbergianardifolia Gris. » phragmitoides Gris. Oryza latifolia Desv. ....... A Y SAA A A A Panicum adustum Nees...... » amplexicaule Rudge. > elephantipes Nees.... » atm Sd. » paucispicatum Mo- A A Panicum Prionitis Nees..... » proliferum Lam..... » sulare Trim. al » spectabile Nees. typ.. » trichoides Sw....... Paspalum stellatum Fluegge. » vipabumn Md... Pennisetum latifolium Spr... Piptochaetium bicolor (Vahl.) Poa chubutensis Speg....... » lanigera Nees........... A » patagonica Speg........ » pilcomayense Hack. (v. ca- LA E 0d LAS Eca pratensis Dis » scaberula Hook. f....... AnaL. Mus. Nac. Bs. As., SER. C. R. cambio de nombre e Ch. Chub. Ch Tue; BA. BA. ¡TE Tuc. Tuc. Ch. Tuc. | Ch. (Ola BAS Ch: S£. Ct. Sgo. S£ 00h; BA. Ch. BA. BA. Form. Juj. Ch. Ch. Ch. BA. BA. Chub. BA. ¡0% Chub. var. 40E C. Chub. Chub. Citada Antes M. Sf. C. R. Ct. T. (Ext.) BA. C.Sf. Ch. Form. (Br.). Pat: Pat: BA. (Eur.). BA. (Eur.). C. (Am. bor.). 0% Tuc. Form. (Bras.). Tuc. (Ur. Br. etc.). PE Me (UrMbariBr) Form. (Parag. Br.). BA. Sf. E. Form. (Br.). E. Por. Mis. (Br.). Form. (Parag.). E Corr. (Parag. Br.). BA. Ch. (Parag. Br.). E. Corr. Form. (Ur. Par.) Form. (Br.). Forma (Parr): T Mis “(Bras.). E. T. Form. (Bras.). PATO LS: (xt). BA. (Chile). Chub. Pat. BA. (Ext.). Fueg. (Ext.). Chile. tip. Form. (Parag.). Fueg. Pat, (Ext.). Fueg. Pat. C. Juj. (Ext.). Dv. Maáxyo 11; 1911: 13 194 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AJRES. Citada Especie e Ahora Antes Secalki corealle DR io BA. €. BA. (Ext). Setaria Onurus (W.) Trin....| Sgo. Ch. Pat. BA. E.C. T. (Ext.). » viridis (L.) P. Beauv.| BA. | BA. (Hur.). Spartina ciliata Kth........ | BA. ¡| BA. (Urug. Bras.). Sporobolus brasiliensis (Rad- cn ai EA ATEN ¡BA E, | Pat. BA.C. T. Mis, (Ext.) Sporobolus subinclusus Phil... RN.C. Mend, Stipa filiculmis Del.........| Chub. C. Chub, Neuq. BA. Sf.C. | (Ext.). y EDEN EA A Sta. Cruz. | Sta. Cruz (Ext.). » latifolia Hackel « Arech. Córd. | BA. (Ext.). » megapotamica Spr..... C. | BA. (Ext.). » plumosa Tr. « Rupr....| Tuc. | Pat, M. T. S. Juj. (Ext.). » pogonathera Desv...... Chub, RN. M. | S2.C, (Ext.). » sublaevis Speg......... Ch. | BA. A: O ARAN. 5, | RN. BA. M., (Ext.). » uspallatensis Speg..... ES M. Triodia Figueirai Arech..... C. Ch. E. (Urug.). Trisetum subspicatum (L.) : El D. vophlcold. Da os. SC ¡ Fueg. Pat. Triticum vulgare L. typ..... 0: BA. (Ext.). CATEGORIA IIL Novedades para la Argentina. Nuevas subvariedades y variedades. Citada antes como de: Andropogon saccharoides Sw. gen. subvar sub- ESA ARA Am. bor. « aust. Andropogon Sorghum Brot. subvar. muticus A AAA Bras. Agropyrum repens P, B, var. maritimum Koch. Europa. STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. Andropogon saccharoides Sw. var. genuinus. H. » Salzmanni (Trin.) H. var. arista- Bromus hordaceus L. var. leptostachys Beck... Eragrostis virescens Presl. var. trichophylla iento. Hack bas da Glyceria plicata Fr. var. spicata Lange....... Lolium temulentum L. var. macrochaeton A. Br. Paspalum ovale Nees var. apiculatum Hack... » quadrifarium Lam. var. minus Doell. Phragmites communis Trin. var. flavescens Cus- Poa pratensis L. var. subcaerulea (Sm.) Asch.. Tragus racemosus (L.) Hall. var. biflorus Hac- A A IO A EIN A Triticum vulgare L. var albidum Alefeld....... » » » » erythrosperm. Koerner. Nuevas especies. Agrostis pectinata Hackel $ Arech............ > Snoop lla EU o te e Andropogon Hassleri Hackel................. AIS Ida RUMmboldlidaa DTD: veo oa e » longiseta Steud. var. robusta Scribn.. EE UI AOVICION O DUI. ia iia DES COOTLOQNCAS DI e oa llos: Bouteloua vestita (Wats.) Scribd.............. EC OLOR Calamagrostis fuscata SteUd.......oooomoo... Danthonia virescens Desv Elionurus latiflorus Nees mas gracias Palito aaa Eragrostis neomexicana Vasey. » orcliocidda Mack es aida a > ¡PURPURASCENS ANS O elo o ida Erianthus Trinii Hackel Citada antes como de: Chile, Bras. etc. Urug. Bras, Europa, Afr. Europa. Australia. Italia. Europa. Parag. Bras. Europa. » >» Urug. Chile. Parag. Am. bor. » > Europa mer. Urug. Chile. Am. bor. Urug. Europa. Urug. Parag. Bras. Chile. Perú. Chile. Urug. Parag. Bras. Chile. Am. bor. Parag. Urug. Parag. Urug. Parag. Bras. Chile. Bol. Perú. 195 196 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Citada antes como de: Panicum cyanescens ÑNeeS..........ooo..o.... Urug. Parag. Bras. >. decipiens Neen..20ic0d:: Os: PRACOLE » > » >». facticulalaa: SW > >: Bras, » hirticaulum Presl.................. Am. bor. A A AAA Parag. Bras. Antill. > Maduro ATOCh AI IA Urug. a ff. nodifiorun Tara SII Il » Bras. Paspalum malacophyllum Trin. tyP........... Parag. Bras. Pennisetum nervosum (Nees.) Trin............ Urug. Parag. Bol. Bras. Porpuiajenica PRI DAA Chile. Rottboellia selloana Hackel................... Urug. Bras, E ET AS A Parag. Bras. Stenotaphrum dimid. (L.) Br. v. amer.(Schr.) H. Urug. Bras, CATEGORIA IV. Novedades para la ciencia. Nuevas formas. Andropogon sacch. ssp.leucop. sv. perf....... forma fusco-aristatus St. Andropogon sacch. var. imperatoides H..... » ad var. brasiliensem H. vergens H, A AAA » breviaristata Hackel. » Spegazzinii Arech. v. pallesc. H.. » colorata Hackel. Bouteloua aristidoides (H.B.K.) Gris....... » vagínis latioribus St. A AM AA » violascens Hackel. Bromus unioloides (W.) HBK, f. chasmog... subforma achalensis Stuckert. Calamagrostis eminens Steud.............. forma brevipila Hackel. » ITA E rd A RN » grandaiflora » Chloris distichophylla Lag................ » inter genuin. et var. argent Hackel. Hragrostis lugena Hack... .0.0..n..ecas=» » — pallida » Feostuca uninodis Hack... .o0ocenpirrsans. » binodes » Po PA AS A SPA » — anomalum » O PM AA » Minor » » a A MA O O ANA » intermedium » Pappophorum mucronulatum Nees..... de » intermedium » Paspalum malacophyllum Trin v. longipilum A A E ais 2100 md e ea adi A de » ¡parviflorum » Paspalum multiflorum Lam............... » abbreviatum >» > stellatum Fluegge............... >» — hirsutum » STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. halaris anousta NeeS..ocosisss coo oc. ... Piptochaetium ovatum Desv............... Poa bonariensis Poir » > DI A RI AS a es Bolypogon elongatus. Ktho cuotas. 0... . » monspeliensis (L.) Desf......... Asaria caudata Rod Oi o oracils ELPBoK aaa aos dd » » 2 » DA A A 2 2 >» » Aporobolus arcutus Ktbh..........odoc. 2 » asperiftoltus ¡Nees: dd laa » Subinelisus pa as a Stipa Ichu(R «€ P.) Kth.v.gynerioides(Ph.) H. A Tragus racem. Hall. v. berteron (Sch.) Hackel. forma macra >» LON Hackel. atratum > planifolia » scabrifolia » minor > nanus Stuckert. ramosa Hackel. breviglumis » megalantha Stuckert, grandiflora Hackel. ramulosa > purpurascens » biflorus > panicula expansa St. interrupta Hackel, depauperata » rubescens Stuckert. Nuevas subvariedades y variedades. Agropyrum repens AR Andropogon saccharoides Sw. Patria limitada de la subvar. ó var. var. scabriglume Hack. Jujuy. veinperatold. E... 2. subvar.muticus » Chaco, Aristida Adesc. L. var. argen- a A - » densiflora » Córd. Aristida venustula Arech.... var. scabrifolia » Chaco. Briza triloba Nees .......... » interrupta » Córd. Bromus unioloides (W.) H. A A » pubescens » Tuc. Danthonia cirrata Hackel « IR >» melanathera » Córd. Diplachne fusca (L.) P. Beanv. » macrotricha >» Chaco. Elymus andinus Trin........ » proliferus Speg. Chub. Festuca chubutensis Speg.... >» submutica Hackel. >» Glyceria plicata Fries....... » scabriflora » BA. Gymnopogon spicatus (Spr.) A io: » brevisetus » » Hierochloé utriculata Kth... » juncifolia » Chub. Melica Stuckertii Hackel.... > cordobensis » Córd. Microchloa indica (L, f.) OK, » tenuis H. « St. 198 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Patria limitada de la var. Paspalum densum Poir...... var. elliptico-oblong. Hack. Chaco. « inaequivalve Raddi. » glabriflorum Hack. >» Piptochaetium ovatum Desv. » purpurascens » » Poa lanigera Nees........... » Stuckertii Hack. Córd, > » MO E OS » tandilensis » BA. Poa pilc_mayensis Hackel.. » calamagrostoi- dea 27 Tue: Polypogon elongatus H. B. K. » MUuticus » > Stipa caespitosa (Gris) Speg.. » Liloi AE » latifolia Hackel « Arech. » grandiflora » Chub. » » » » » pallens » » Nuevas especies. Agrostis an? nov. spec. aff. A.scotanthae Phil....... Adrogopon coloratus Hackel (nomen)............... A Bromus obtusiflorus EN A O LES Calamagrostis Hackeli (H.) Lillo.................. » pulvinata Hackel..........oo.o..... Distichlis lawviflora NS A RA PE Eragrostis longipila A O O Festuca an? nov. spee. aff. F. Ulochaetae Doell..... Gymnopogon muticus Hackel (nomen).............. Pennisetuman?nov. spec. aff. P.complanato (Nees) H. Poa calehaquiensis Hackel......c.oooooooommmmos o.» » dolichophylla E EA EA » glomerifera A A AOS EA » Lilloi AE e RA e EOS AN » lobata > (LOMO ac baran » micranthera » ERA AN » MUñozensis AA NS a e ale E » superata E Setaria platycaulis Stuckert «€ Hackel............. Schedonnardus ? sp.? an? n0V. JON.....oooooooo.. Supe hypogona Balbkol.... .. 00 PO. E TAB. III. Stipa Stuckertii Hackel (N.” 151). . Planta (Y2 magn. natf.). . Panicula (magn. nat.). . Lígula Spicula Gluma I. Gluma II. Gluma III. (fertilis). Palea lodiculae, stamina, pistillum. TAB. IV. A. Calamagrostis Hackelii Lillo (N.” 199). Planta (magn. nat.). Folia innovationum (?/,). Spicula (*/4.) Gluma fertilis, palea et flos (8 Yz / 4) a latere visi. » » (8 12/14) a dorso visi. TAB. 11. De Calamagrostis pulvinata Hackel (N.* 217). Planta (magn. nat.). Spicula (? /4). Gluma fertilis, palea (*/ 4). Anthera (*/1). TAB. 1.21, 5) PE / ZA ll] NA IN Kie (ÍNST+ AUP | Jos. Fleisehmann, del. ' Jmpr. A. Berger, Wien. Aristida multiramea Hack. TaB. N.” 2. = 1D, j NN z SA TN, 1) VW LE a ! 1 > = a N NJ . 5 E Su) A PY UN é N= > EI E / ” : E TEN WIR As Ga 3 AA e, dl y ¡2 Z > a _— DA PEA AAN: A E a » EN a RRA rana ' E S SS 2 ei JA WAYNE — ARSS ATI o, y WISIN YN Ñ pS 4 ¡ (A es N AF Jos. Fleischmann, del. Jmpr. A. Berger, Wien. Stipa polyclada Hack. TAB, NN, 3 IN ÑN ! | ) Jos. Fleischmann, del. . Impr. A. Berger, Wien VIII. Stipa Stuckertii Hack. TAB NOA A5 8%, Jos. Fleischmann, del. Jmpr. A. Berger, Wien VIIL A. Calamagrostis Hackelii Lillo. B. Calamagrostis pulvinata Hack. INDICE DE LOS NOMBRES LATINOS Pág ¡Mesilopsincurvata L.... ......... 174 Aegopogon tenellus Trin.......... 19 Agropyrum repens (L.) P. B. v. maritim. Koch. 2,175, 194 » » v. scabrifol. Doell.... 175 » » — v.scabriglume H. 175, 197 » » Vv. vulgare Doell. 176,186 Agrostis bromidioides Gris........ 95 memilnens (presi Grsto ass 99 exarata DEM. ains 93, 191 » Hackelii Fries typica...... Ep HS » » f. viridiflora H..... 96 hygrometrica Nees % ...... 96, 191 » laxiflora Rich v. aristata Gris.. 2, 97 » .mmontevidensis Spr. typ..... 95, 191 a aristata Doc 2 9 LOL » » y. submutica Doell..... 97, 186 » nana Kth. v. aristata Gris.... 97 pan icoldes amos 42 pectinata back tanda: 97, 195 » pulchella Kth. typ.......... 98, 186 » AUR. UA Sc 98 » > E a da obs 98 scotantha Bal os 98 » stenophylla Phil........... 98, 195 3 vyerticillata Vil... coo... 98 A o Ao 98, 198 Aira aciphylla Franch............- 106 AMA Ebc OO 107 brasiliensis Raddi 91 EAS pios ltda er 107 » cCcaryophyllea L.... ....... 105) 145)L Stibspicate Lisa pens 109 Airopsis millegrana Gris........... 2, 92 Alopecurus alpinus Sm..... 00000. 88 > rantareticus Vabl..cooo...oos- 58, 191 » aristulatus Michx.......... 88, 191 ce nicula tas aio eat tote 89, 191! » » var. aristulatus (Michx.) MOTTA es 89 Pág. Alopecurus variegatus Steud....... 88 Ampelodesmos australis Brongn... 126 eS montana a DS le LAO Audropogon coloratus Hack.... 13, 198 » condensatus Kth. v. gen. subv. CUDASS a 13 » Cconsanguineus Kth. v. gen. 13, 186 » » V. humilior H.......... 13 » contortus L. gélo.......... 13, 186 » » v. secundus H..... 13, 185 ass ler Ela en 14, 195 y Us pida A ae 20 » imberbis Hack. et var. P. genuin. ATC do 17 7 macrothrix Brin ia 14 » nutans L. vs. agrostoides (Sp.) EC ss diad. 14, 186 » » » fe adstipoid. H.verg. 14 » » v. avenaceus H.... 15 » » ve. pellitus H..... 15, 186 » » v. stipoides H....... 15 paca lat 15, 186 » » fo ad consang. verg. 15 » » var. elongatus H..... 15 » saccharoides Sw. genuin. H. 15, 195 » >» genuin.subv. submut. Vas. 16, 194 » » var. barbinodis (Lag.)H... 16, 186 » » » imperatoides H....... 16, 186 >» » fo av brasil. H. verg... 16, 196 » » subv. muticus H......... OLA » » v. laguroides (DC.) H... 16, 186 » » subsp. leucopog. (N.) H. SUD. p Es 17, 186 » » »subvar.perforat.(Tr.) H.17, 186 » > » >» » fe fusco=arist. St. 17, 196 » Salzmannii (Tr.) H. v. arista- CU aaa 17, 195 » selloanus Hack............. 18, 186 » Sorghum Brot.v.cernuus Karw. 15 » » v. vulgaris Hack.......... 18 » » subsp. halepensis (L.) H. 18, 186 206 Pág. Andropogon Sorghum subps. hale- pensis subv. mutic. H.... 18, 194 > EQUAL LOS US A Sa 18 » encerio sacos bea 18, 186 Anthaenantia lanata Bth........ 29, 191 Antoxanthum odoratum L. ..... 63, 191 Aristida Adscensionis L.sp.anomal. 64 » » var.argentina H......... 65,186 » subv. densiflora H..... 65, 197 ¡breyiseta essa 65 » » » caerulescens(Desf.) H. 65, 186 » » »f.adv.modest.verg.H. 65 » subv. condensat, H. 65, 187 A E AS O 65 modesta. El. 2e 65 » >» » pumila (Decs=ne) Coss. 1D A 2, 65, 195 AS EOS AA 66 ivarnecato El Di an 66 » fasciculata Torr.v.Nutt. Thurb. 6b » Hhumboldtiana Tr. « Rupr. 2, 66, 195 » longiseta Steud. v. robusta L.- SECA a ea ADOS O > MEeNAoOCIMa Phllvia nio cal 67, 187 >» multiramea Hack,.......... 67, 198 O AA A 69 pallens Cav. gen...........-. 69, 187 » » f. breviaristata H.. 69, 196 ad v. intermedia Tr. » » pS 69 » > y. tenuicula H........ 69 » » ad. v. tenuifolia Nees O A 70 $" pumia DOC cenar 65 » Spegazzinii Arech. gen..... 70, 191 » » » v. abbreviataH. 70 » » ve. pallescens H...... 70 » » » f. colorata H.... 70, 196 » venustula Arech. v. scabrifol. ERA e O O A OS 71,197 AI NS DEB OR DO Ut 71 Arundinella brasiliensis Raddi..... 20 > HS RA (WN DB Dodd. e 20, 191 ALUDIO DORA Va 126, 187 » neglecta UBLA:: eones 102 » Posa UTE a es 126 » nto AA Ed 102 Atropis argentinensis Hack. fo. mendozina H......... 162, 192 » convoluta Gris.v.mendozina H. 162 Avena caryophyllea Waber........ 105 A e SA AA 110 » » v. glabrata Peterm..... 110 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Pág. ¡“Avena hirsuta Roth... CN 110 > ludoviciana Dun e 2 MOHO > ¡Sabiva Mio idoo co NA 1565 > ¿¡scabrivalvis Drin... 0% 111, 195 2 Stern Dd a 111 » » Ind. ¿Kew 110 > subspicata Clav AN 109 MBouteloua aristidoides (H. B. K.) Enusten N 118, 187 » » e vag. La toSh. 118, 196 » curtipendula (Michx.) Torr. 119, 187 » lophostachya Gris ........... 119 >». multiseta ¿(Gus a 119, 187 » » var. pallida H...... 119 polystachya (Bth.) Torr...... 119 > simplexiLaz.. 0... 0008 MN) » vestita (Wats.) Scribn... 2, 119, 195 Briza elegans Doell...:..i. 000% 143 ls erecta. Lam... 20 143, 192 » glomerata Hack. € Arech. 143, 192 » » OK ooo is AN 144 » lamarkiana NecS.............. 145 > maxima Dir eN 2, 144, 195 y minor L......5... e 145 » stricta (Hook.) Steud......... 145 > subaristata Lam... 000% 145, 192 ». triloba Nees ui. ua ON 146 » » f. pumila HAN 146 » » f. violascens H.... 146, 196 » » var. interrupta H. 146, 197 > uniolae Nees. 0 ca 146, 195 » Uniolae Nees.....¿ 1. aan 146 > violascens Steud.... cren 145 Bromidium hygrometric. N. € M.. 96 Bromus auleticus Trin........ 169, 187 coloratus Steud .......... 169, 192 » erectus Hudson........ A 170 hordacenus: LL. ¿00.000 170, 192 » » Ve. leptostachys Beck. 2, 170, 195 macranthus Mey.....¿. 000% 171 mollis DL... «oe ero 170 » » vec. leptostachys Beck. 170 > obtusiflorus Hack......... 171, 198 » setifolius Presl... mom aa 171 unioloides(W.) HBK f. cleis- togama H..... AAN 172 , » » f.chasmogama H..... 172 » » » subf.achalensis St. 172,196 » » var. brevis (Steud.) H... 172 humilis Desv...... 173, 187 pubescens Hack... 173, 197 » valdivianus Pbhil.......... 173, 19% » » » » » » STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. Pág. Calamagrostis capitata Hack...... 100 » eminensSteud. f. brevipila H. 99, 196 » .erythrostachya (Desv.) Hark. 99 » fuscata (Presl.) Steud....... 99,195 A ackeli Elo 100, 198 » MHieronymi Hack........ a OL E A oi lack Latas a 1KOpL » » f. grandiflora Hack. 102, 196 » malamalensis Hack.......... 102 » montevidensis Nees....... 102, 187 » » var. subcoutracta Nees.. 102 » nardifolia (Gris.) Hack... 102, 192 » neglecta (Ehrh.) Gaertn.. 102, 192 » » » v. poaeoides (Us sora aaa 102 2 mealco ls ds coo to sao 2, 102 » patagonica (Speg.) Macl.. 103, 192 » pulvinata Hack........... 104, 198 » rosea (Gris.) f. typ+............ 105 >» » » H. f. arista alt. inserto id os 105 » » fo spicul. pallid. H..... 105 » » var. viridula Hack ..... 105 » » spiciformis Hack... .... 105 SURCOS NUDO cio. Parla: 102 Calotheca brizoidea P. B........... 143 Cenchrus echinatus L.......... 38 Sp. » myosuroides H. B. X....... 54, 187 » nervosus (Nees.) OK.......... D4 nens DR . D8 tribuloides Md 54 » » var. macrocephal. Doell. 54 PES ACOyas d4 Chaetochloa onurus (W.) Scribn Mer eds 20) Chaetochloa viridis (L.) Scribn..... 9 Chamaeraphis viridis Porter....... 58 Chascolytrum erectum Desv....... 143 » subaristatum Desv... 145 Chloris ciliata Sw. ........... 114,187 f. breviseta Hack.. 115 » distichophylla Lag.genuin. 115, 187 » » > » f.inter gen. et var. MU a 115, 196 » » var. argentina Hack...... 115 A polydaciyla 115 » » fe pauciradiata F. K.... 115, 187 » » Vvar+breviaristata Hack. 115, 187 Aa dia O a 116 » » var. beyrichiana (Kth.) H. 116 AVE Wien 116, 187 > CA ana 116 Chondrosium polystachyum Bth... 119 Pág COMA ña acia To A ld lachrymama VU Tí Coleataenia gynerioides Gris....... 2, 41 Cortaderia dioica (Spr.) Speg.. 125, 187 » pilosa (D'Urv.) Hack...... 125, 192 > adiuascula tapia 126 Cottea pappophoroides Kth..... 124, 193 Cynodon Dactylon (L.) Pers.... 114, 187 Dactylis glomerata L............. 147 Dactyloctenium aegyptium (L.) K. RICA INS 191, 187 Danthonia cirrata Hack. € Ar. Mos tootoudoa as ope pjos 111, 192 >» » var. melanathera EE. pasao o sota aa be 112, 197 » Hieronymi(OK.) Hack....... 112 » » var. jujuyense (OK.) H.. 113 cas OM Sao o0 tags oo 113 » virescens Desv............ 113, 195 Deschampsia aciphylla (Fr) Rs cosppeoooo pdas agar 106, 192 2 ada o Si 106 » antarctica Hack. ......... 106, 192 » caespitosa (L.) P. B..... 2, 107, 192 Deyeuxia capitata Wedd........... 100 > emimensiBresl es 99 USC tao 100 » hygrometrica (N. € M.) Speg.. 96 y meo . 102 y) pata gonita pei la 103 Digitaria adusta (Nees.) Gris....... 31 Diplachne carinata (Gris.) Hack. 128, 187 » Chloridiformis Hack....... 129, 187 » dubia (H. B. K.) Scribn... 129, 187 » fascicularis (L.) P. B..... 129, 192 y uscar BB ts 129, 187 » » var, macrotricha Hack. 1830, 197 » latifolia (Gris.) Hack...... 130, 187 » mendocina (Phil.) F. Kurtz 130, 192 » » (Phil.) Macloskie... 130 » » CAMILO! ouadocbane 130 » spicata (Nees.) Doell...... 131, 187 dec uo. poo peon oooO y Roda be 131 Distichlis laxiflora Hack...... 141, 198 » scoparia (Kth.) Arech. .... 142, 187 >» spicata (L.) Greene ....... 142, 187 > >otirta (Bal) OK 142 » » var. mendocina (Ph.) H. J42 » >» » thalassica (H.B.K.) H. 142 Eleusine indica (L.) Gaertn.... 120, 188 208 Pág. Eleusine tristachya Kth....... 120, 188 Elionurus candidus(Trin.) Hack. 12, 188 » latiflorus Nees...... . 12,19% > Jiviridulas Heel 13 Elymus andinus Trin. ......... 184, 192 > > var. proliferus Speg. 1841, 197 > ¿raebis Phil io st 184, 195 Epicampes arundinacea (Trin.) Hack SE 93 » Caerulea Gris. var. submutica Hack ARAS 93 Eragrostis airoides Nees........... 91 » atrovirens (Desf.) Trin........ 134 > capillaris (L.) Steud.........- 132 >» jaccida Lindas 135 > Bypnolides BSP cci.. 132, 192 » interrupta (Lam.) Doell... 132, 188 x Toncipila Hack 2d 132, 198 IUSSna Noe: cie 134, 188 > » fo pallida Hack.... 134, 196 » » subsp+flaccida (Lindm.) Hack us ode 134, 188 megastachya (K.) Link....... 134 » mexicana (Lag.) Link......... 134 A 135 A A AAN IA 135, 188 neomexicana Vasey. ... 2,135, 195 » nigricans (H. B. K.) Steud.... 136 » orthoclada Hack.......... 136, 195 VIORESCANES Dadas o . 137, 188 » » var. delicatula (Tr.) Hack. 137 purpurascens Nees....... 137, 195 > YOPaMsNeOBs das isa 132 » retinens Hack. € Arech... 137, 188 » trichophylla Benth............ 138 E A A 146 » virescens (Kth.) Presl..... 130, 185 » f. majór. Lack. «ts 138 > » var. trachyphylla Hack... 1835 >» » » trichophylla(Bth.) IN A 138, 195 Erianthus saccharoides Michx. v. COL deta a 10 o PUEDO HACE. Edit dia 10, 195 Eriochloa montevidensis Gris..... 30 » » fe subcolorata Hack, 30 + ¿polystackhya: HL. B. K....cois.. 30 + Epunetata HaldiW.crocins dos 30, 192 Festuca acanthophylla Desv...... 163 » calchaquiensis Hack.......... 163 » cChubutensis Speg......... 163, 192 » » var. submutica H. 163, 197 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Pág Festuca Commersoni Franch... 164, 192 > dissitiflora Steud............. 174 > > “var. loricata Gris... 164 $ 'ertostoma PEHlack. 3. A 161 > ¿ascicularis am IR 129 » Hieronymi Hack. typ......... 164 » » f. panic. exp. Hack.... 164 > ¡monticola ¡Bai 165, 195 > murales” HA e 166, 192 > ¡Myuras Dio. Ek Sos CEA 166 » ovina L. v.magell.(Lam.) H. 167, 192 » purpurascens Bks ú Sol.. 167, 192 1 ¡Bciuroldes Roth... corola ae 168 » setifoliaSteud. f.mutica Hack. 168 > tnInodes Hack iamm.. al 168 » » f» binodis Hack.... 168, 196 » sp. aff. Ulochaetae Doell...... 169 A E EA 169 Glyceria plicata Fries. v. scabri= ora ¡Hack aah 161, 197 » » Ve spicata Lange..... 162, 195 > Spicata! (HUSS aida a 162 Goldbachia Mikani. Trin......... . O Gymunopogon biflorus Pilger....... 117 y laevin Neesió. Conca on 117 » var. longearist. St........ 117 > Dúuticos Dacia di int 117, 198 apicatus (Spr) OR on 117 » var. brevisetus Hack. 117, 197 » » var. pluriflorus Doell.... 117 Gymnothrix complanatus Nees.... 97 » JARTOUIEA DAA se 0h io ON 54 >. DOTyONUS NOBS) 1220... 200% 13) iristachyús 1. BD. Berns natos 54 Gynerium argenteum Nees ........ 125 » pilosum (D'Urv.) Macl......... 126 Malochloa acerosa GriS........... 2, 194 Helopus punctatus Nees............ 30 Hierochloé utriculata Kth. v. jun=- clfol. Ha die 64, 197 Hordeum comosum Presl...... 180, 188 » compressum Gris............ 2, 181 » » var. superatum Hack.. 181 » » y. tenuispic. H. 4 St... 181 distichim Li io 180 ; hexastichud Loc 181 > Subataa Di. cia ca ds 0 EA 180 » murinum L,. subsp. leporin. O A A AS as 181, 188 > ¿pusillum Nutb.... ... 2010 181 » secalinumSchreb.v.parvifl.H. 181 STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. Pág. Hordeum stenostachys Godr. 2, 181, 193 » » var. superat. (H.) St... 181 » » var. tenuispic. (H. € SIN y de e 181 > IIEAE Iiioo ooo gas oa 181, 193 ZE O CIRO MU 181 Hymenachne montana Gris........ 59 » Wan 1 lonocovoovo nos ao. al Mehnanthus pallens Muxnro....... 46 Imperata arundinacea (L.) Cyr. v. condensa (1) aaa 9 » brasiliensis Trin.. .. 8, 193 >» cauca Um soc dadVa se e 8 ca udata Gris. aaa sale 9 » Cylindrica (L.) Cyr. var. condens- (55) E 9, 193 » Iminutiflora Hack............ 9, 195 Sap INTA Oderson taras 8 Ipnum mendocinum Phil... ....... 130 Ischaemum hispidum H. B. K..... 20 >» secundatum Walt............. 97 Ixophorus viridis (L.) Nash........ 3 Koeleria Bergii Hieron....... 138, 193 » » LOMA Ni 139 SU iz ac ode 139, 188 » phleoides (Vill.) Pers......... 139 Masunas cylinder 9 Lasiacis divaricata (L.) Hitch. «4 Ch. 35 Leersia hexandra Sw............. 62 Leptochloa fascicularis (Lam.) A. Cr 129 » mucronata Kth............ 121,188 via ta Ba 121, 188 Leptocoryphium lanatum Nees-.... 29 Lepturus incurvatus Trin...... 174, 193 Lithagrostis lacrima Jobi Gaertn.. 1 Lolium multiflorum Lam. typ.. 113, 188 » » var. muticum DC.. 174 » perenne L 174 » » f. anomala Hack. 174, 196 » Trigidum Gaud.. E 174 > » var. aristatum Hack. 174 > EMMA Mess soosoocobesos 174 » » var. macrochaeton A. Brea aa e 2, 174,195 Luziola leiocarpa Lindm........ 59, 185 Lycurus alopecuroides Gris....... 88 Manisuris selloana (Hack.) OK..... 11 Melica argyrea Hack........... 139, 185 Pág Melica aurantiaca Lam........... 139 » cordobensis Hack.......... 139, 140 Melica macra Nees.............. 139, 188 pap ilon acc 140, 193 » sarmentosa Nees.............. 140 MS tuUckcrtiun ac 140 » »var.cordobensis Hack139,140,197 » violacea Cav 141 Microchloa indica (L. f.) OK.... 113, 185 » » var.ten.(Hack.)4St.113, 197 » setacea (L.f.) R. Br.... 113 | Milíum compressuM SW............ al 2 Eme 1) Ve Dodocoomoprosose 29 UA e 30 Monandraira patula Phil........... 107 Monanthochloé littoralis Engelm 124,193 Muehlenbergia diffusa W....... 86, 188 y ana Ra aa 86 » nardifolia Gris.......... 87, 188, 193 » peruviana (P. B.) Steud....... sí >» phragmitoides Gris......... 87, 193 Munroa benthamiana Hack.... 125, 188 > ISQUALLOS AM 125 A | Nassella trichotoma (Nees) Hack.. $84 Ophiorus incurvatus P.B ......... 174 Oplismenus composit, (L.) P. P. v. loliaceus (Lam.) H.......... 46, 188 Oryza latifolia Desv............. 59, 193 IS A 60, 193 » » v. latifolia Doell...... 59 Oryzopsis bicolor (Vahl) Speg..... 85 Panicum adustum Nees.......... 31, 193 » agrostidiforme Lam........... 39 » amplexicaule Rudge........ 31, 193 AU COMUN 39 » Bergii Arech 32, 188 > cayemenso Man e 31 O oo de 32 » » fo maculatum Arech.. 32 » commelinaefol. Kth........... 45 COM LESS 51 » Cruz galli L. typ............ 32, 188 » » Ve breviset. Doell... 33,189 » » Ve. sabulicola » o 5, HEN) » » Ve. vulgare a POR » Cyanescens Nees....... 199,196 » debile Desf. v. aequiglume Ha a aa 34 » decipiens Nees.............. 34, 196 » dichctomum Michx 210 MUSEO Pág Panicum dimidiatum L............ Dí > divaricatom Di see 35, 38, 189 » elephantipes Nees ......... 35, 193 > [enneareurum Gris......M....: 86 y "excelsum Neeson tit 43 > fasciculatum SW + orcas 36, 196 » Sar USC 96 > fayuam Dogll. A Aa 47 » 2 ¿Need A 47 » globuliferum Steud. ......... 50 > ¡granuliferm HH. B. lisos... 33 »STUmostma Needs hs 43, 196 » hirticaulum Pres]........ 2, 36, 196 insulare (L.) Mey. v. typic.. 37, 189 » var penicillig. (Speg.) Hack tdlastilcde 31, 189 » » sacchariflor.(Raddi) 1 37 » » tenerrimum (Kth.) O A 37, 189 EYES AA A AA 38, 196 latatolimo Dodo des 38 IA PA A e y 89 laxum Sw. typ...... ta DOLO » fo minor Hack....... 30, 196 A O A A 39 miliaceum Walter...........:. 42 ailMolides Neta. eses 39, 1850 » fo intermedia Hack. 40, 196 monostachyum H. B. K .... 40,189 Mulero De. iia 45 najadum Hack. et Arech.... 40, 19; ri AAA 40 OMIC AO 11 paucispicatum Morong..... 41,193 platycaule (H. € St.) Kneuck.. 51 platycaulon OK. ........ raja 0% platyphyllum Munro......... 41 A 2, 41, 193 proliferuma Lamina 42, 193 CINTAS MI 0 2 43, 193 var. grumosum (Nees) HAC: e aa 43,191 sanguinale L. var. ciliare (R.) E A 44 y. digitatum Hack... 44, 189 » » vulgare Doell...... 14 setosum Sw. var. 3. Nees...... 50 spectabile Nees. typ.... 44,189,198 » Y. helodes Hack.... 441,189 TenMonlona MEN + es foto ss 39 trichanthum Nees............. 45 trichodOr ir acia coli 45, 193 NACIONAL DE BUENOS AIRES. Pág. Panicum uncinatum Raddi......., 45 » urvilleanum Kth. typ........ 45 » » f. panic. exp. St....... 46 » » velutinosum Nees typ. vir.... 46 » f. violascens St....... 46 Di rs 46 Pappophorum alopecuroideum Hie- A O 123 > 103) Vabl ens. coser 2, 121, 189 >» » caerulesc.5Stb.....:. 122 mucronulatum Nees. typ... 122, 189 > Ef elatior St... es 122 f. intermedia H....... 123 >. pumila. His 123 » fospicul. minor. H.... 123 » var. subsimplex H.... 123 » » » vaginat. (Phil.) H. 123, 191 pappiferum (Lam.) OK. v, mu- cronulatum ..... A » saccharoides Gris........ 2, 121, 122 >». vaginatum Phil. aj. 0008 123 Paspalum acuminatum Raddi...... 21 > Compressum Nees./...- 1.2 E conjugatum Berg.............. 21 ,) 'cojabense Tr. 28 densum Poir. y. ellipt.-oblong. odo 21, 197 > dilatatum Poir. genuin..... 22, 189 » var. parviflorum Doell. 23 » » sacchariferum Arech. 2 > f. paucispica H....... 22 distichum L. gen........... 22, 189 > var. Digitaria Hack. 22, 189 Bleronyal Hack... 0 : Co 22 humboldtianum Fl. var. Stuc= kertil Hack... 20 22 inaequivalve Raddi. v. glabri- florum Hack....... 23, 197 ladatuom HB Bas 29 Larrañagai Arech..... . .. 23, 189 malacophylium Trin.genuin. 24, 196 > lineariful. Hack..... 24, 191 > longepilum Hack.... 24,189 » f. parvifllorum Hack. 25, 196 millegranum Schrad. ......... 21 multiflorum Doell.f. abbrevia- tam. Hadas 25, 196 notatum Fluegge............ 25, 189 ovule Nees, v. apiculat. H. 26, 195 platycamlon PT al, 189 plicatalum MichZ. 45 dea 070 27 STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. 2 NE » fe atratum Hack.... 85, 196 > var. chaetophor. (Gr.) Pág. | Pág. Paspalum plicatulum f. macra H.. 27 | Poa glomerifera Hack... ..... 151, 198 > quadrifarium Lam............ 27 » holciformis Presl............. 152 » » veelongatum(Gris.) H. 27 » hypnoides Lam................ 132 » » V. minus Doell...... 27,195 » lanigera Nees..... ln. ... 152, 1983 » scoparium Fluegge.........-. 27, 189 » » var.Stuckert. Hack 152, 198 » stellatum Fluegge.........- 28, 19%; >» » tandilensis Hack. 152, 198 » » fo hirsuta Hack..... 28, 196 » lamuginosa Poli... Lodo... 153 » vaseyanum Scribn.. ..... -.- 23 » Lillo Hack 153, 198 » virgatum L. typ... .......- 28, 193 > obata Hada 154, 198 » feoligostachyum Hack. 29 » micranthera Hack......... 154, 198 » vulnerans Salzm..........-... 21 » muñozensis Hack.......... 155, 198 Paspalus ovalis Nees........<...--. 26 > myriantha Hacks. dadas 156 Pennisetum chilense (Desv.) Jacks. 54 >» A emoralis Mi 156, 193 A OU SP DIOS » patagonica Phil........... 156, 193 » montanum (Gris.) Hacks 313) > pilcomayensis Hack. v. cala= » nervosum (Nees.) Trin...... 59, 196 magrost. H. 157, 193, 296, 198 » rigidum (Gris.) Eso 56 y pratense A) > » var. longisetum Gris.. 56 » var. subcaerulea (Sm.) losa AB 56 IN Ra 158, 195 » an? sp. nov. aff. P. complanato » purpurascens Link........... 137 Neeson 97, 189 >» reptans BA 132 Phalaris angusta Nees.........- 62, 189 » scaberula Hook. f......... 158, 193 » macia Hacks 62, 196 » Sellowii OK. (non Nees)....... 153 » canariensis L.-.....oooo.o.oc-. 63 > superata Hack... 159, 198 » intermedia BosC.......o.oo.o... 63 A o OTE 160 Pharus glaber H. B. K.......-. 59, 189 » sps. aff. lanuginos. Poir....... 158 Phragmites communis(L.)Trin. 127, 189 | Polypogon elongatus RA UE ie 93 » » ve filavesc. Custer. 2, 127, 195 » > Minor ack... gue 197 Phleum alpinum L............. 3 1188 » var. muticus Hack.... 94, 198 Piptochaetium bicolor Desv..... 85, 193 » ¡interruptus H. B. K. typ...... 94 asian thu Gus So » var.crinit.(Trin.) H. 94, 190 » leiocarpum (Speg.) H. f. papi- » monspeliensis (L.) Desf..... 94, 190 MO lsssn osyoscoas tajo) » fe argentinus Hack.... 94 » napostaénse (Speg.) Hack..... Ss) » fe nanus Stuck...... 95, 197 ovatuma Desvio iaa jaa 8), 189 PICA. 117 Rottboellia compressa L. f. v. fas= Hack tro A. SO ciculata(Lam.) H. 11,158, 190 « ve purpurasc. Hack.. S6, 197 > dimidiata los eu ola Dí » ruprechtianum Desv.......... S6 nc ata 174 » tuberculatum Desv........... 86 > selloana Hace 11,196 Porilprra Bonansa 158 > Ecole lee da bosodado9oa ay > NIE sn Ono oa oos Oslas aos 147 » tripsacoides LamM.............- 57 » bonariensis (Lam.) Kth.... 147,190 f. planifolia Hack.. 148,196 | Saccharum giganteum Trin........ 10 í. scabrifolia Hack. 148, 196 EOS Sa IE o so bayo op boo Pone 8 » cCalamagrostoidea Hack....... 157 Schedounardus paniculatus (Nutt.) > calchaquiensis Hack...... 148, 198 O, 118 » carrenleofuensis Speg......... 159 DAMA 115, 198 » Chubutensis SpeYS.......... 149,193 | Secale cereale L...........-... 176, 194 » Compressa L. var. virescens Serrafalcus mollis Parl............- 170 DI Al IS 158 | Setaria caudata R. y S............ 47 » dolichophylla Hack........ 150, 198 » f. ramosa Hack..... 47, 197 [89 Págs. Setaria commutata (Scribn.) Hack. 47 la ya ¡Ribbon iS: 47, 196 laca MINA 47 » globulifera (Steud.) Gris....... 2, 50 > ¡gracilis E ¡B: K:úNDoo... >. 48, 190 » f. breviglumis Hack 48, 197 » f. breviseta Hack... 48,190 » f. brevispica Hack.... 48 » f. flaviseta Hack...... 48 » f. longiseta Hack..... 48 » f. megalantha Stuck 49, 197 » f. radicans Hack..... 49 » V. purpurasc. Hack. 49,190 » ¡imberbis R. y $. genuina...... 48 » var. gracilis (H. B. K.) Hack nara sea 48 » f. brevispica Hack.... 48 » f. flaviseta Hack...... 48 » f. longiseta Hack...... 48 A AA 48 » v. purpurasc.(H.B. K.) ACE o » Hassleri Hack. v. aegualis H. 49 >» Ablantia: Hack. bs ds 49 » f. subhirsuta Hack.... 49 » macrostachya H. B. K...... 49, 190 » Onurus(W.) Gris....... 49,190, 194 » f. grandiflora Hack.. 50, 197 >» f. ramulosa Hack... 50, 197 > penicillata Pres]l............ 1,190 » platycaulis «St » Hack...... 51, 198 » setosa P. B. typ » f.adleianth. verg.... 52 » f,microstachya Hack. 52 » var. ínterrupta St.... 92 y OEA da CJ: Bis ai ds 52 $ Malta (IE rd OA Sieglingia acuminata Ok........... 128 e AREA Dia cio ateo 128 » pilosa (Buckl.) Nash........ ES Solenachne phalaroides Steud...... 114 SDArtióa CUlata th de 114, 194 A COBTOLAS IIA daa A » montevidensis Arech....... 2 ELA Sphaerium lachryma (L.)OK....... 7 Sporobolus argutus (Nees.) Kth.. 90, 190 » » f. purpurasc. Hack. 90, 197 » » var+ tuberculatus (H ) A A 90, 190 asperifolius Nees «€ Mey.... 91,190 » fe spiculis bifloris H. 91,197 » brasiliensis Hack........... 91, 10M OEA A RO 92 Sporobolus ligularis Hack > » > A MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. phlevides “Hacks ramosissimus Kth subinclusus Phil .eoo co san...o ........+..... 93, 194 f. panicula expausa St. 93, 197 tuberculatust. oe . Stenotavhrum americanum Schr... 57 > dimidiatum (L.) Brongn. v. ge- NUI. Es ¿Acer aiN 7 » » v.amer.(Schr.) H. 57, 196 » glabrum Trin..... ad O 57 » var. americanum Doell. 58 » sarmentosum Nees............ ay $ secundatomO Ko... aa 58 > «second OK ten OR 58 Stipa bicoloriValblt Lo 008 85 » brachychaeta Godr........... “1 » cCcaespitosa (Gris.) Speg. typ... 72 » var. elata Speg..... 72, 191 » var. Lilloi Hack.... 72,198 > “coresensis: OK: ¡ona OS 13 + ¿ClaraziMiBallzió.. O ÓN 12 » cordobensis Speg.......... AA » curamalalensis Speg........... 83 >» fliculmis Del... 73, 191 > 'Mllfolla: Neeb; 2... 0. 000 78 + hyalina Neeson 73 » hypogona Hack... .u.mmo..... 73, 198 y Abal. Plano 75,104 >. Acho (E ds) 0 75, 190 » » var, gynerioides(Phil.) Hack. 75 » f. interrupta Hack... . 76, 197 intermedia Trin. y Rupr...... 8) > Juncoides peu... ¿5 2er vir » latifol. Hack.« Arech v.typ. 76, 194 » ve. grandiflora Hack 76,198 » v. pallens Hack..... 76, 198 >» latissimifolia DÍ... 08 76 > leptostachys Gris... ..c...». ri manicata Desv;. 07: Nkio0N MN » » Speg. (non Desv.)...... 76 » megapotamica Spr... . 77,194 » melanusperma Presl.......... 77 » Neael Nets. 00.0 an aain Ti » neesiana Tr. y Rupr........: Wi « fe contorta Hack.... 78,190 » f. depauperata Hack 78, 197 » Ve. hispid. (Speg.) H.. 78,191 v. virescens Hack.... 78 » pampagrandensis Speg..... 78.190 > pApposa ÑNeesy..0. 0. gun 78 » plumosa Tr. € Rupr........ 79, 194 » var. gracilis Speg... 79,191 STUCKERT: GRAMINÁCEAS ARGENTINAS. Pág. Stipa pogonathera Desv.......... 79,194 » polyclada Hack............. S0, 198 » sanluisensis Speg............. sl » setigera Presl.f.hispidulaSpeg. 78 tu ckerti Hacks. de 81, 198 » sublaevis Speg.............. 82, 194 > EMM oa oa ase aa o aa, 88, 194 > » var. argentina Speg... 83 var. papillosa Hack... 83 » tenuissima Trin. € Rupr...... S8 > » var. curamalal ensis (SP creta S3, 190 » uspallatensis Speg.........- 84, 194 Syntherismaadusta(Nees.) A. Chase. 31 Morresia utrculata ER. y Bi... 64 Trachypogon Montufari(H. B. K.) NE AO 12 Tragus racemosus (L.) Hall. var. berteron. (Sch.) H.... 19 f. rubescens St... 19, 197 v. biflorus Hack. 3, 19, 195 Trichloris mendocina (Phil.) F. > » » > » >» GUIANA 000 oUO caca 116, 190 » pluriflora Fourn........... 116, 190 » fi macra Hack. 0... 116 Pág Trichloris verticillata Fourn....... 116 Tricuspis acuminata Munro... .... 128 Triodia acuminata (Munro) Vasey.. 128 a venacca E RU A 128 » var.longearistata F.K. 198 » Figueirai Arech........... 127, 194 » paraguayen.(OK.) Hack... 128,190 » pilosa (Buckl.) Elm. Merill. 128, 190 DS E Eo ado ae ooo 128 Trisetum phleoides Kth........... 109 » sclerophyllum Hack....... 108, 198 » subspicat. P. B. y. phleoides ESA CA 109, 194 Triticum durum Desf IS ads 176 » repens L, var. maritim. Koch NT INS RA E 175 A 176 » vulgare Vill. typic......... 176, 194 » Var. aestivum Kth........ 177 » var. albidum Alefeld. 2, 177, 195 >» Var. erythrospermum ÍNDICE DE NOMBRES VULGARES. Pág A E e A 63 A O So OO O Cl 59 INTA AS ado oa 39, 60 ADC o aa 60 COMU e 60 ORINA a 60 WMiiurBras SR 7 Camalote de cesto (Ch.)........... 30 Carardecesto (Uns 35 2 TA O 127 Eapruecabayú (Oh)... ciouemea sacarla 24 Koer OO > Var. hypernum Kth....... 177 Uralepis pilosa Buckl.............. 128 Vilfa ramosissima Trin.. ......... 92 Pág. Capií-camalote del agua (Ch.)....... 81 LAN (USE loo aora ados 43 ds oa coo al 59 A noo (Oo anoue9s decada: 122 » quico (Brasa ioes 21 y Ey (Uia)asorosocos NA 14 Capim andacá (Bras. iaa: 45 » da praia (A la 59 > ce Lala (CA Decococoosne 21 2» de Cmos (CS De ono. 7 AA 35 » estrella (A Oe 28 » manga do campo (Bras.)...... 12 AnaL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xIv. Mayo 24, 1911. 14 214 Pág. Capim missanga (Bras.)........--- 7 >» papuan (A SS de 58 Capyi-quiycé (CorT.)oooooooooo....- 41 CA A NS Se 41 Cepadatconua a ias 181 > dea banco mi es 181 > de dos (Carreras e 181 MAA A e 181 7 TAMOS ia io e 181 Centeio (Bras.)....... A TEN 176 Centeno (Arg.)....... O NS 176 Chab-grass (Nueva México)......... 135 Gola dergato (UA ta. a eo es 122 TACO 192, 145 Conta dera ate ole 41 Fic amMa DAD rata to os 18, 53 AO O ds 71 CIO e aii peras 55 E AI OS 519) » de cabellos (Texas)............ 119 NAAA A 63 $ amada (Dra) lo ete 58 Gramilla de bañado............ 89 Mairy-grama (Texas).............. 119 Lágrimas de Job (Bras.)........... 7 A o O O Pr 7 Miña-can pil (Bras), ..voorudcaninoso 41 ÑNandu-capihi (Parag.).......... .. 121 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Pág. Dri RN ero 181 Paja aparejera........... embrión co: 54 > raya (Corriere 41 > "colorada (CANA 13 e mansa (OA) ass oem 43 OLA OA a ES 73 Pasto cabezón (Ch.).... 38 > "CRAbO.. 0 mae en cocino EN 38 >» de'arana (CH 31 » de cana (Oh). vea. cta 38 > de camada (UH): oe de 15 » de cesto (Ch.)...... NN 35 > ¡de SuUAnatO. ne. Sesto sana 125 » de laguna (Uh lacus >, > "ABIDICHÓ 2 al le 42 + ¡del POSQUE A ara a 59 + embalsado (Cl)... nes 35 > pampa (BA)... su... | Pelillo plateado.........ooomooo..o.. 105 MBatonera (hdi MO 64 ROBeÍA. ce E 53 ¡Dapo (Bras di A S SimboOlL RADA 50 Tacuará-m(0h.)...... o... AS Tacuarilo (OA) 2 o 14 | Trigo de varias clases......... .. LO ¡ALTA Vetiver da terra (Bras.)............ 12 YWahapé colorado (Ch.)............. 8 ,. DISTO (OA reta 8 ICONOGRAPHIE DES BRYOZOAFRES FOSSILES DE L'ARGENTINE PAR FERDINAND CANU. DEUXIEME PARTIE PRÉFACE J'ai regu a Paris les fossiles Bryozoaires du Río Negro et de Roca dans le courant de l'année 1908, En deux ans j'ai pu étudier to us ces matériaux et en publier les résultats gráce á la générosité avec laquelle Monsieur Fl. Ameghino a bien voulu doter cette publication. Je ne saurais donc trop le remercier et lui en témoi- gner ma plus vive reconnaissance. La plupart des espéces sont nouvelles. Elles ne se rapportent aúucunement aux especes crétacées connues dans l'hémisphére austral et dans 1'Amérique du Nord. J'ai pu cependant les compa- rer, spécimen a spécimen, avec les espéces daniennes du New- Jersey et avec les especes sénoniennes de Madagascar. Plus heu- reux que mo1, Monsieur Lang a découvert récemment des especes européennes dans le Crétacé du Sud africain. Les Bryozoaires étudiés ne sont pas toujours d'une bonne con- servation. Leur étude n'est pas sans difficulté. Mais le travail le plus pénible en fut certainement la microphotographie, car il a. fallu surmonter toutes les difficultés possibles. Je remercie done sincerement Monsieur Pilarski du dévouement sans borne qu'il m'a témoigné dans l'accomplissement de cette rude táche. Les nou- velles planches sont équivalentes a celles de la Premiere partie, et nous vaudront, je l'espere, les mémes encouragements. BIBLIOGRAPHIE POUR LA REPUBLIQUE ARGENTINE ot a 10. 11. 13. 14. ET L'HÉMISPHERE AUSTRAL. . 1852-1875.—Busk G., Catalogue of Marine Polyzoa, London, $." . 1850.—Busk G., Polyzoa of Kergueien Island. Phil. Trans. Roy. Soc., vol. 168, p. 188, . Busk G., Report of the Scientific Results of the Voyage of H. M. $. Challenger «Polyzoa». 1854.—vol. 10, pt. 30. 1886.—vol. 17, pt. 50. . 1889.—yol. 31, pt. 79. Supplementary Report by Waters A. W. . 1904.—CaLver L., Diagnose de quelques especes de Bryozoai- res nouvelles ou incompletement décrites de la région sub- antarctique de l'Océan Atlantique. Bull. Soc, Géol. France, t. 29. . 1904 —CaLver L., Bryozoen bearbeitet. Hamburger Magalha- ensische Sammelreise. . 1904 —Canu F. Bryozoaires du Patagonien. Mém. Soc. Géol. France, Paris, 4.2 t. x11. . 1842.—D'OrbiGNY A. Voyage dans l'Amérique méridionale, vol, 5, pt. 4, Zoophytes. Paris, 4." . 1806.—JuLLren J, Mission scientifique du Cap Horn, Bryozo- alres, vol, 6. 1578-1890. —Mo GiLLivraY P. H. «Polyzoa»>» in the Prodromus of the Zoology of Victoria. Edited by F. Mc Coy. 1895.—Mc GrLLivrRaY P. H., Monograph of the Tertiary Poly- zoa of Victoria, Trans. Roy. Soc. Victoria, vol. 4. 2. 1898-1903.—MAPLESTONE, Further descriptions of the Tertiary Polyzoa of Victoria, Proc. Roy. Soc. Victoria, vol. 11 á vol. 16, 9 parties. 1902.—OrtMaNnN, Reports of the Princeton University Expe- dition to Patagonia, vol. 4, pt. 2, 1886.—SroL1czka, Fossile Bryozoen aus dem Tertiáren Grund- sandsteine der Orakey-Bay bei Auckland. Novara-E:t pedi- tion. Greologischer Theil 1, Bd. 2. Abth. Paláontologie. 15. 16. 17. 18. 19. 20. 2t. 22. 23. 24. 27. 28. 29. 30. 3l. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. ALT 1881.—Warers, A, W., On Fossil chilostomatous Bryozoa from South-West Victoria, Australia (Curdies creek). Quart. Journal Geol. Soc., vol. 31, p. 309. 1882.—Warkers, A. W., On Fossil chilostomatous Bryozoa from Mount Gambier, South Australia. 1d., vol, 38, p. 251. 1882.—Warers, A. W., On chilostomatous Bryozoa from Bairnsdale (Gippsland). 1d., vol. 38, p. 502. 1883.—Warers, A. W., Fossil chilostomatous Bryozoa from Muddy Creek, Victoria. Zd., vol. 39, p. 423. 1885.—Warers, A. W. Chilostomatous Bryozoa from Aldin- ga and River-Murray Cliffs, South Australia, /d., vol. 41, p. 219. 1884.—Warers, A. W. On fossil cyclostomatous Bryozoa from Australia. 1d., vol. 40, p. 614. 1887.— Waters, A. W. On tertiary chilostomatous Bryozoa from New-Zealand. /d., vol. 43, p. 40. 1887.—Warerss, A. W. On tertiary cyclostomatous Bryozoa from New-Zealand. Zd., vol. 43, p. 337. 1887.—Warers, A. W. Bryozoa from New South Wales, North Australia, etc., Ann. May. Nat. Hist., ser. 5, vol, 20 (pt. L, IL, 1D). 1839.—Wamrers, A. W. Bryozoa from New South Wales, North Australia, etc., Ann. Mag. Nat. Hist., ser. 6, vol. 4 (pt. IV). . 1904—Warers, A. W. Résultats du Voyage du S. Y. Belgica, o Zoologie, Bryozoa, Anvers, 4 . 1905.—Warkekrs, A. W. Notes on some Recent Bryozoa mn D'Orbigny's Collection, Ann. Mag. Nat. Hist., ser. 7, vol LUIS 1905.—Warees, A. W. Bryozoa from near Cape Horn. Lin- nean Society's Journal, vol. 29, p. 230. 1905.—Warers, A. W. Bryozoa from Chatham Island and d'Urville Island, New Zealand. Ann. Mag. Nat. Hist., ser. Y, vol, 17. 1859.—Busk, G., A. Monograph of the fossil Polyzoa of the Crag. Palaeontoyraphical Society. 1907.—Canvu, F., Bryozoaires des Terrains Tertiaires des en- virons de Paris. Annales de Paléontologie, t. 2. 1862.—Garn and Horw, Description of new species of Amerl- can Tertiary and Cretaceous fossils. Journal of the Academy of Natural Sciences of Philadelphia, ser. 2, vol. 4. 218 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 32. 1862.—GaBB and Horx, Monograph ot the fossil Polyzoa of the Secondary and Tertiary formations of North-America. Td., B.2, WOL'D. 33. 1889.—JeLiY, E. C., A synonymic Catalogue of the Recent Marine Bryozoa. London, 8." 34. 1345.—MicueLtrx, H., Iconographie zoophytologique. Par:s, 4.2 35. 1904 —UrricH and BassLer, The Miocene deposits of Mary- land. Maryland Geological Survey. 36. 1910.—L. CaLver. Expédition antarctique frangalse comman- dée par le Dr. Jean Charcot. Bryozoaires; pp. 1-47, pls. 1-11. 37. 1900.—F. Canv. Révision des Bryozoaires du Crétacé figurés par d'Orbigny. Cheilostomes. Bull. Soc. Géol. France, 3* série, t. 258, pp. 334-463, pls. 1v-vrir. 38. 1907-1910.—F. Cawv. Bryozoaires des Terrains tertialres des environs de Paris. Annales de Paléontologie, tomes 2, 3, 4, 5. 39. 1905.—F. Cawu. Iconographie des Bryozoaires fossiles de VArgentine. Anales del Museo Nacional de Buenos Aires. Tomo xvu (Ser. 3.*, t. x), pp. 245-341, pls. 1-x1r. 40. 1851-1854.—pD'UrbIGNY. Paléontologie francalse, t. v, Terrains crétacés; Paris, 8S.”. 41. 1899 et 1908.—I. W. Grecory. Catalogue of the fossil Bryozoa in the British Museum, vol. 1 et 11, London, 8.”. 42. 1908.—W. D. LawnG. Polyzoa and Anthozoa from the Upper Cretaceous Limestone of Need's Camp, Buffalo River. An- nals of the South African Museum, Vol. vu, pp. 1-11, pl. 1. 43. 1839.—E. Peraews. Révision des Bryozoaires du Crétacé figu- rés par d'Orbigny. Cyclostomes. Bull. Soc. belge de (Féol., t. 11, pp. 305-400, pls. xr-xrrr. 44. 1907.—0. UrnricH AnD S. Basster. Bryozoa from New Jersey. In Stuart Weller: A report on the Cretaceous Paleontology of New Jersey. Bryozoa: pp. 313-355, pls. xx-xxvIL. lota.—Les numéros en chiffres gras correspondent á ceux qui, dans le texte, sont placés entre crochets. BRYOZOAIRES CHEILOSTOMES MEMBRANIPOROIDES?. — AwNasca Levinsen, 1909. Fam. MEMBRANIPORIDAE Surrr, 1866. Gen. MEMBRANIPORA BrarwviLtE, 1834. Ectocvste et Cryptocyste chitineux, laissant par leur disparl- tion une grande ouverture ou opésie limitée par un cadre plus ou moins garni d'épines. Bibliographie anatomique.—1871. H. Nrrscuk. Beitrage zur Kenntnis der Bryo- zoen. 111. Ueber die Anatomie und Entwickelungsgeschichte von Flustra membra- nacea. Zeitschrift fiir wissenschaftliche Zoologie, Xxt, pp. 416-470, pls. XXV-XXVIL. 1888.—W. Freesk. Anatomish-histologische Untersuchung von Membranipora pilosa L., nebst einer Beschreibung der in der Ostsee gefundenen Bryozoen. Archiv fir Naturgeschichte, Liv, Band 1, pp. 1-42, pls. rn. 1898.—A. W. Warers. Observations on Membraniporidae. Linnean Society's Journal-Zoology, vol. xxvr, pp. 654-691, pls. 47-49. 1900.--L. CaLver. Contribution á l'Histoire naturelle des Bryozoaires ectoproc- tes marins, pl. vi, fig. 7. Montpellier 8.*. 1903.—Caxon A. M. Norman. Notes on the Natural History of East Finmark. Annals and Magazine of Natural History, Sér. 7, vol. xt, p. 567, pl. xt. 1. Membranipora arborea, nov. sp. Pl. 1, fig. 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13. Diagnose.—Zoarium grand, libre, eylindrique, a rameaux dicho- tomes se terminant en pointe. — Zoécies grandes, hexagonales, disposées en quinconce irrégulier, séparées par un filet tres mince, un peu ectociptées á la base. Cadre régulier, mince, tres finement 1 Pour la terminologie consulter: J. Canu. Révision des Bryozoaires du Crétacé figurés par D'Orbigny. Bull. Soc. Gréol. France, 3* série t. 28, p, 338, 1900. 220 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. denticulé. Opésie entiére, grande, polygonale. — Avicellaire petit, irrégulier, intercalé dans les espaces interzoéciaux.—Ovicelle? doteio [L2=046-0,551 onésio | Lo =0,87-0,42 esle AA 0 1 039 POLO o =0,24-0,28 Variations.—Les gros rameaux atteignent plus d'un centime- tre de diamétre. Les coupes que j'al faites indiquent un zoarium multilamellaire. Aussi, comme c'est la regle, les Zoécies sont tres variables en forme et en grandeur. J'ai pu disposer de plusieurs fragments et tenter une restauration zoariale de cette magnifique espéce. A la base, elle devait encroúter les huítres. Localités. — Rocanéen de Río Negro et de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 2. Membranipora Langana, nov. sp. Pluva be D105 1409) Diagnose. — Zoarium grand, libre, cylindrique, arborescent, formé de plusieurs couches de Zoécies amoncelées. — Zoécies elliptiques, irréguliéres, séparées par un petit sillon, disposées en quinconce trés irrégulier. Cadre régulier, mince, lisse. Opésie entiére, elliptique, lisse.—Avicellaires petits, irréguliers, inter- calés dans les espaces triangulaires interzoéciaux: — Ovicelle inconnue. Lz =0,29 - 0,37 ¡Lo =0,18-0,24 Zoécie Opésie lz =0,22 E o 130/18 Variations. — L'espéce est portée par un encroútement multi- lamellaire rampant sur les huitres. Le Musée ne posséde qu'un seul spécimen entiéerement libre; les autres sont placés dans la gangue calcaire trés dure dont ils ne peuvent étre séparés. Affinités. — Cette espéce se distingue de M. arborea par ses zoécies beaucoup plus petites et par son zoarium arborescent ramifié non dichotomiquement. 1 Le millimétre est pris pour unité. BANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 221 Les Membranipores arborescents sont tres rares. M. janieresien- sis que nous avons découverte dans le Turonien francais est trés différente tant par les dimensions zoéciales que par la nature et la disposition des avicellaires. Je dédie cette espéce á M. Lang, mon savant confrére du British Museum. Localités. — Rocanéen de Río Negro et de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 3. Membranipora abortiva, nov. sp. JA, a ayas al Diagnose.—Zoarium encroútant les huítres.—Zoécies grandes, allongées, pyriformes, séparées par un sillon profond. Cadre mince en haut, trés épaissi á la base, arrondi, finement granulé. Opésie antérieure pyriforme, tres finement denticulée.—Zoéciules imter- calées, convexes, saillantes en avant, tres amincies en arriére, percées antérieurement d'une ouverture ovale.—Ovicelle petite, globuleuse, carénée, non fermée par lPopercule. Mode y Ez =0,46 Ones ¡ Lo =0,27 -0,31 PE 0199 O 0 160.18 Observations. — L'ouverture de lP'ovicelle est perpendiculaire au plan de Popésie. Dans cette position, il est évident que la valve operculaire chitineuse fermant la zoécie lui est inférienre; les larves s'échappent done par Vouverture de Vovicelle et non par celle de la zoécie. Dans d'autres Membranipores, Pouverture ovicellarienne est in- trazoéciale; elle est alors fermée par la valve operculaire. Cette distinction est capitale. Elle fournit un bon caractere toujours 1m- portant dans ce genre si polymorphe. Levinsen [loc. cit., p. 46] appelle Heterozaeecia les cellules non pourvues de polypide mais contenant des muscles operculaires. Tels sont les avicellaires et les vibracellaires. Mais 1ci1 nous avons une troisiéme forme qui ne peut étre rapportée aux deux précé- dentes: c'est un cas spécial d'avortement. Les zoéciules de ce fos- sile me paraissent étre des zoécies avortées, car elles sont toujours á la place de zoécies qui n'ont pu se développer normalement par suite de l'irrégularité du bourgeonnement. 222 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. V Les zoécies avortées sont tres communes dans les Membrani- pores, mais elles conservent toujours les caractéres des zoécies normales. Ce nouveau polymorphisme est done tres important á signaler car 11 paraít indiquer une disposition spéciale des muscles operculaires. Les plus grandes zoécies avortées observées mesurent 0,40 sur 0,14. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 4. Membranipora claudata, nov sp. Pl tig. 4,0. Diagnose.—Zoarium encroútant les huitres.—Zoécies distinctes, allongées, séparées par un sillon profond. Cadre mince, régulier, presque tranchant. Opésie grande, totale. — Petits avicellaires salllants, placés dans les espaces triangulaires interzoéciaux.— Ovicelle petite, un peu globuleuse, paraissant s'ouvrir dans la zoécie.—-Zoécies closes nmombreuses, convexes, ornées de grosses ponctuations trés rapprochées. ¡Lz=0,41 -0,46 (Lo =0,33-0,37 Zoécie a Opésie lz =0,22-0,29 Pe2S lo =0,15-0,18 Variations.—Le bourgeonnement est souvent irrégulier; 1l occa- sionne des déformations zoéciales variées. Ainsi, certaines zoécies prennent un aspect losangique, avec pointe aigué et saillante, qui rappelle celui des onychocellaires incomplets. Que sont les zoécies closes? Leur étude anatomique dans les espéces vivantes n'a jamais été faite. Nous ne pouvons faire que des suppositions. Elles ne doivent contenir ni polypide, ni sys- teme musculaire. Elle sont tapissées intérienrement de tissus mesenchymateux et revétues extérieurement par Pectocyste chiti- neux. Elles ne sont jamais isolées et se groupent toujours en sur- face plus ou moins grande. La cause de leur formation et leur utilité nous sont inconnues. Affinités.—Flustrellaria ovalis d'Orbigny [40], p. 521, pl. 724, fig. 18, du Coniacien de Fécamp, en France, présente á peu pres la méme forme zoéciale et des cellules closes identiques. Mais ses dimensions micrométriques sont beauconp plus grandes, le sillon CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 2923 de séparation est a peine accentué et les avicellaires paralssent manquer. Membranipora onychocelloides. Calvet [36], p. 15, pl. 1, fig. 9, des régions subantarctiques, me parait trés voisine de notre M. clau- data. Elle contient aussi des zoécies modifiées en sorte d'onycho- cellaire sur l'organisation desquelles l'auteur donne quelques dé- tails anatomiques. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 5. Membranipora capillimargo, nov. sp. Pl. 1, fig. 6. Diagnose.—Zoarium grand encroútant les huitres.—Zoécies dis- tinctes, allongées, elliptiques, séparées par un profond sillon. Cadre d'une minceur extréme, lisse, tranchant. Opésie tres-grande, totale, elliptique.—Zoécies closes convexes, poreuses. Lo =0,27 -0,33 Mo 0 BE01s e | Lz = 0,35 - 0,42 Zoécie : | lz =0,22 - 0,28 Opésie Affinités.—Il n'existe pas de Membranipora ayant un cadre aussl mince. Son épaisseur maxima est de 0,04. Ce caractere suffit pour la différencier de M. claudata précedemment étudiée et des autres fossiles argentins décrits dans la premiére partie de cette Icono- graphie. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 6. Membranipora Watersiana, nov. sp PL 1, fig. 1,2, 3. Diagnose.— Zoarium assez grand, encroútant les huitres.—Zoécies distinctes, allongées, séparées par un profond sillon, réguliéres, ovales. Cadre mince, finement strié, régulier, plat, bordé par un tres mince filet saillant. Opésie elliptique, médiane ou un peu antérieure. — Ovicelle petite, saillante, globuleuse, échancrée en avant.—Zoécies closes peu nombreuses, tres convexes, ornées de pores tres serrés. Zodeio Ez =087-042. ,. [Lo=0,22-0,97 $ esie : A 00d m0 13 201s 924 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES Variations.—L'ancestrule est petite, ronde, fragile. Dans son voisinage les zoécies sont plus petites; leur cadre est régulier. Ce dernier s'élargit un peu á la base sur les bords du zoarium. T'ovicelle s'ouvre extérieurement. Elle présente, bien visibles, les deux couches dont elle est formée; le coitis et le sparganile. Les zoécies closes présentent quelquefois en avant une petite dépression en fer a cheval qui semblerait marquer la place d'une valye operculaire attachée á lectocyste chitineux disparu dans la fossilisation. Certaines zoécies présentent un double cadre. Elles ont subi le phénomene particulier connu sous le nom de régénération du polypide. Le premier polypide construit le cadre extérieur; il dé- génere et se transforme en corps brun. Dans la méme zoécie, un autre polypide formé aux dépens des éléments du tissu mésen- chymateux, lui succede et construit le cadre intérieur ?. Affinités.—Cette espece est tres voisine de Flustrellaria aculeata dOrbiyny [40], pl. 127, fig. 16, du Sénonien de La Fléche en France. Toutefois ses dimensions sont beaucoup plus petites et. son zoarium n'est pas libre. Je dédie cette belle espéce au plus célebre des bryozoologistes, á mon savant ami, W. Waters, en souvenir des nombreux conseils qu'il a bien voulu me donner. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 7. Membranipora Okaiana, nov. sp. Pl. 1,118. < 30: Diagnose.—Zoarium encroútant les huítres et les gastéropodes. —Loécies tres grandes, indistinctes, allongées, hexagonales, sépa- rées par un faible sillon á peine visible. Cadre régulier, plat, tres finement granulé. Opésie allongée, elliptique, médiane, grande.— Ovicelle inconnue. A A R$ r désie |lz =0,37 - 0,38 p llo =0,24 - 0,27 1 Sur ce singulier phénoméne le lecteur peut consulter: L. CaLver. Contribution á lVhistoire naturelle des Bryozoaires ectoproctes marins, Montpellier, in 8.*, p. p. 137 et 417. G. MR. Levixsex. Sur la régénération totale des Bryozoaires. Académie royale des sciences et des lettres de Danemark, 1907, n.” 4, p. 151. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 225 Affinités.—Cette espéce, d'une simplicité de structure remarqua- ble, se rapproche de Membranipora Ligeriensis d'Orbigny [40], pl. 607, fig. 5, de 'Aturien de Meudon, en France, mais qui manque malheureusement au Muséum d'Histoire naturelle de Paris. Elle se distingue de Reptoflustrina bimarginata V'Orbigny [40], pl. 733, fig. 16, par Pabsence de marge intérieure dans Popésie. Je dédie ce fossile au Dr. Oka, mon savant confrére de Tokyo, au Japon. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). S. Membranipora Cummingsi, nov. sp. 12d rats 10 Diagnose.—Petit zoarium encroútant les huítres.—Zoécies indis- tinctes, Iirréguliéres, ovales, élargies á la base, quelquefois séparées par un sillon peu profond. Cadre mince en haut, trés élargi en bas, plat. Opésie antérieure, ovale ou elliptique.—Obvicelle grosse, sail- lante, s'ouvrant intérieurement, présentant une large échancrure médiane et ornée de deux cornes latérales. Zobci | Lz =0,46 Ovési | Lo = 0,24 - 0,27 O0€ecIe ; ese / |lz =0,22-24 06 Affinités.—Par son zoarium encroútant et ses zoécies irréguliéres etindistinctes, cette espece se distingue nettement de Flustrellaria similis d'Orbigny [40), pl. 727, fig. 6, du Santonien de Vendóme, en France. Je dédie ce fossile au Dr. Cummings, mon savant confrére de Chicago. Localité. — Rocanéen de Rio Negro (Coll. Coronel Antonio Romero). 9. Membranipora lineata lLiwwkkE 1768. iio AS BIBLIOG RAPHIE ZOOLOGIQUE 1859. Membranipora lineata Hiwcks. British Marine Polyzoa, p. 143, pl. xix, fig. 3-6. 226 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 1889. Membranipora lineata JeLLY [33], Catalogue, 152 (Bi- bliographie). | 1898. Membranipora lineata Waters Observations on Membra- niporide. Linnean Society's Journal, Zoology, vol. xxv1, pl. 48, fig. 9. 1900. Membranipora lineata A. RoBErTsON. Papers from the Har- riman Alaska Expedition. Proceedings of the Washington Academy of Sciences, vol. 11, p. 324. 1903. Callopora lineata Canon A. M. Norman, Notes on the Na- tural History of the East Finmark. Ann. Mag. Nat. Hist. Serie Y, vol. xx, p. 588, pl. xn, fig. 2. BIBLIOGRAPHIE PALÉONTOLOGIQUE 1870. Membranipora lineata MAxzon1. Bryozoi fossili italiani, 1v, Sitz. d. k. Akad. d. Wissensch., xv, p. 10, pl. 11, fig. 13 (non pl. 11, fig. 14). 1851. Membranipora lineata Waters [15], Curdies Creek, p. 323. 1887. Membranipora lineata Waters [21], New Zealand, p. 45. Observations. —Le meilleur des spécimens, celui que nous figu- rons, est placé autour de l'ancestrule, ce qui a rendu sa détermi- nation tres difficile. Cependant les principaux caracteres de l'es- pece sont nettement visibles. Les cadres, tres minces, sont tres espacés les uns des autres. La couche externe de l'ovicelle ou coitis est incomplétement calcifié et présente un léger sillon trans- verse. Le petit avicellaire ectocysptal est tres mince, allongé, la pointe tournée en haut. Les mesures micrométriques sont naturel- lement plus petites que celles d'un spécimen plus ágé. Zoócio! Lz = 0,46 E Lo = 0,22 - 0,26 j S180 0292 )17 =0,22-0,26 P229 Po =0,140,16 Affinités.—Malgré Vanalogie des figures, il ne faut pas confon- dre cette espéce avec Membranipora plebeia Gabb et Horn [32], pl. 20, fig. 43. Le fossile américain est mal figuré. Le cadre est plus épais, l'avicellaire n'est pas constant et il n'est pas pointu. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Distribution géologique.—Le Membranipora lineata est extréme- ment difficile 4 déterminer, surtout á Vétat fossile. Pour cette CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 227 raison il a passé souvent inapercu. La distribution géologique n'est pas aussl importante que ne le ferait supposer la grande exten- sion de son habitat. En Europe. HeLv£tIEN d'Italie (Seg.), de France (Coll. Canu). AsTIEN d'Espagne (De Angelis), d'Italie (Seg. Nev.). SICILIEN d'Italie (Mz., Nev.). QUATERNAIRE d Ítalie (Seg., De Stef.). Dans 1'Hémisphere austral, Waters Pa signalé dans le TerTIAt- RE d'Australie et de Nouvelle-Zélande, mais avec quelque doute. Habitat.—C'est une espece tres cosmopolite. Tres commune dans les régions arctiques. Atlantique oriental: de la Norwege aux Acores; Atlantique occidental: du Groenland á la Floride. Pacifi- que: sur les cótes de Alaska et dans le détroit de Bass, au nord de l'Australie. Elle a été draguée jusqu'a 150 metres de profondeur, mais elle vit communément sur les cótes. 10. Membranipora Maplestonei, nov. sp. 12 o ate dle 10 lo Diagnose.—Zoarium assez grand, encroútant les huítres.—Zoé- cies distinctes, allongées, séparées par un sillon plus ou moins pro- fond, elliptiques ou subhexagonales, munies d'un trés petit ecto- cyspte concave a la base. Cadre mince a bords obliques, régulier, un peu granuls. Opésie médiane, elliptique, entiere—Ovicelle in- connue.—Petit avicellaire saillaut logé dans les espaces trian gulai- res interzoéciaux. iz 029/2033 OR AS Zoécie : Opésie lz =0,18- 0,20 lo :=013= 0:15 Aífinités.—J'ai pensé un moment que ce fossile pourrait- étre la partie basale de Membranipora Langana. Mais outre la forme zoa- riale, il y a quelques différences marquées. Icile sillon séparatif est plus profond et les espaces interzoéciaux plus grands; le cadre est plus relevé en avant; les zoécies sont plus étroites. Le bourgeonnement irrégulier donne a cette espéce des aspects tres variables dont 1l faut se méfier á la détermination. Je dédie cette espéce a M. Maplestone, le vaillant paléontologis- 228 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. te australien á qui je suis redevable de beaucoup de matériaux de comparalson. Localité.—Rocanéen de Rio Negro “Coll. Coronel Antonio Romero). 11. Membranipora Calveti, nov. sp. a ns (ro ise el Diagnose. — Zoarium assez grand, encroútant les huítres. — Zoécies irréguliéres, peu distinctes, allongées, elliptiques ou sub- hexagonales, souvent séparées par un petit sillon. Cadre régulier, mince, á bords plans, orné de fines stries transversales. Opésie entiére, médiane, elliptique on ovale.—Obvicelle petite, convexe, unie, non formée par la valve operculaire.—Avicellaires petits, triangulaires, convexes, Interzoéclaux. Zoboi | Lz 0,33 - 0,48 as | Lo =0,18 - 0,27 oécie / PENE Désle 2 e 0 180,8 A RE Variations. — En grandeur et en forme, les zoécies sont tres variables, Franchement hexagonales (fig. 5), elles deviennent ellip- tiques (fig. 9) et méme rectangulaires (fig. 6). Elles sont tantót distinctes, tantót indistinctes par suite de la disparition du sillon séparatif. La forme normale des avicellaires parait étre celle de la figure 7. Mais, dans la plupart des cas, ils sont plus grands, peu saillants. Les espaces triangulaires interzoéciaux, visibles sur nos figures sont de vrals avicellaires comme le prouvent les petits denticules latéraux qui marquent la place de la charniére de leur opercule. Souvent par suite de l'irrégularitó du bourgeonnement, il y'y a qu'un seul avicellaire. Affinités. — Cette espece difféere de Membranipora ¡jerseyensis Ulrich et Bassler [44], p. 336, pl. xxtv, fig. 3, du Crétacé supé- ricur du New Jersey, par ses dimensions plus petites, son cadre moins épais, son ovicelle plus saillante et non immergée. J'ai pu faire la comparaison directe avec des spécimens qui m'ont été obligeamment envoyés par M. Bassler. Plus grande que Membramipora Maplestonei, elle en différe encore par la constance et la régularité de ses espaces triangulaires interzoéciaux qui sont de vrais avicellaires. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 299 Je dédie cette belle espéce á M. Calvet, mon savant confrére de Montpellier, dont les tres remarquables travaux en Bryozoologie sont devenus classiques. Localité. — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Assez commun. 12, Membranipora Nordgaardiana nov. sp. Bl eto 10: Diagnose. —Zoarium petit, encroútant les huítres.—Zoécies peu distinctes, séparées par un sillon trés peu profond, trés allongées, ovales ou elliptiques. Cadre régulier, épais, á rebord interne obli- que. Opésie entiére, médiane, elliptique ou ovale, la pointe en bas. — Ovicelle petite, peu saillante, lisse, non formée par Vopercule.— Deux avicellaires, grands, allongés, saillants, obliques. Lz = 0,55 lz =0,28 Lo=0,27 -0,31 Mor = 014201 Zoécie Opésie Variations. — Quand il n'y a pas d'ovicelle, il "y a qu'un seul avicellaire ectocystal. Pres de Vancestrule la plupart des zoécies sont dépourvues d'avicellaire. Affinités. — Cette espece differe de Membranipora Jerseyensis Ulrich et Bassler [44 ], p. 336, pl. xxtv, fig. 3, du Crétacé supérieur du New Jessey, par son opésie moins enfoncée, son cadre plus étroit, ses avicellaires plus petits et plus obliques. Je dédie cette espece au Dr. Nordgaard, mon savant confrere de Trondjhem, en Norwege. Localité. —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 13. Membranipora minuscula nov. sp. Il. 17 no PA. Diagnose.— Petit Zoarium irrégulier encroútant les huítres. Zoécies tres petites, distinctes, isolées, séparées par un profond sillon, ovales, la pointe en haut, portant a la partie inférieure un petit ectocyste convexe trés rétréci. Cadre mince, saillant, lisse a bord rond, un peu épaissi en bas. Opésie antérieure, ovale.— Ana. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xIv. Mayo 24, 1911. 15 230 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Ovicelle tres petite, convexe, peu saillante, presque immergée, s'ouvrant dans la zoécie. — Avicellaires interzoéciaux, petits, sail- lants, ronds, ovales ou acuminés. AN AS Opésie la =0 1820.22 y Lo =0,18 lo =011=0.13 Observations. — Cette espéce est remarquable par ses petites dimensions. Aussi les spécimens un peu altérés par la fossilisation sont difficilement déterminables. Il ne faut pas la confondre avec une autre espéce aussi petite, remarquable par lénormité de son ovicelle et qui se rencontre fréquemment dans la méme localité, malheureusement presque toujours en mauvais état (Pl. 111, fig. 12). Localité.-- Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 14, Membranipora trimorpha, nov. sp. Prime 209 4,00% Diagnose. — Zoarium tres grand, flabellé, a bourgeonnement. linéaire, encroíitant les huítres.—Zoécies de trois formes. 1. Zoécies inermes distinctes, séparées par un sillon tres peu profond, peu allongées, arrondies en avant, comme tronquées en arriére. Cadre épais, élargi en bas, granulé, a bord interne plat et oblique. Opésie antérieure elliptique ou ovale. Avicellaires petits, placés dans tous les angles interzoéciaux, obliques, saillants, tournés extérieure- ment. 2.2 Zoécies armées indistinctes, accompagnées de gros 4Avi- cellaires tubuleux, tres saillants, obliques, tournés extérieurement et un peu en bas. 3.” Zoécies cryptocystées, distinctes, séparées par un petit filet saillant, irréguliéres, allongées ou transverses, ornées dVun eryptocyste inférieur, plas ou moins développé, plan on un peu convexe, finement granuleux. Opésio irréguliére, antérieure, elliptique ronde on transverse. ob / Lz = 0,33 - 0,39 Opésie (Lo=0,22 - 0,24 Zoécie normale ÍA llz =0,24-0,29 1r* y 22 formes | lo =0,13- 0,16 Zoo sriale) Lz = 0,39 Opésie (Lo = 0,18 /10eC18e imosetriale « ¿ a =091 Brtórme Mo, =0 185008 CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 231 Observations.—La trimorphie v'est qu'une apparence d'observa- tion rapide. En réalité il n'y a que deux formes: les cryptocystées et celles qui ne le sont pas. Mais les avicellaires, quand ils sont salllants et tubuleux, donnent aux zoécies adjacentes un aspect particulier et étrange, bien qu'ils soient identiquement placés. Ces zoécies cryptocystées sont marginales; elles sont aussi nombreuses que les autres qui sont par conséquent plus voisines de lancestrale, De plus elles ne sont accompagnées d'aucun avicellaire; méme quand elles se modifient, elles prennent la forme d'un véritable onychocellaire. Ue fait apparait avec une évidence caractéristique a droite de notre figure 5. Ainsi donc, sur cette espéce remarquable, nous trouvons ensem- ble, intimement associés, les caracteres distinctifs de deux familles différentes. Il n'en faut pas conclure cependant que la famille des Onychocellidées n'a pas de réalité propre et qw'elle n'est qu'une fiction de la nomenclature. En effet son riche épanouissement presque exclusif pendant la longue période géologique du Crétacé prouve au contraire la constance indubitable de ses caracteres philogénétiques. Si nous observons ces derniers avec autant de netteté sur Membranipora trimorpha, c'est que cette espece, eb celles dont elle est issue, ont vécu dans des conditions favorables au maintien de leurs caracteres d'ancestralité. Or ces conditions sont particuliéres a l'hémisphere austral et elles se sont exercées sur toutes les classes du regne animal. Variations.—Les zoécies normales sont trés variables. Le sillon séparatif disparait fréquemment (fig. 4). Cette disparition est accompagnée de celle des avicellaires. Le cadre s'amincit ou s'élar- git selon V'irrégnlarité du bourgeonnement. Les zoécies primosé- riales sont plus grandes, surtout en largeur; elles engendrent deux et méme trois zoécies. Enfin le cadre se redresse fortement en avant pour former une saillie sur la zoécie supérieure (fig. 3). Les zoécies accompagnées de gros avicellaires sont plus régu- liéres dans leur aspect et dans leur bourgeonnement. Mais, suivant la regle générale, elles sont plus petites au volsinage de l'ancestrule. Les zoécies ectocystées sont tres variables de forme et de gran- deur. Elles sont ou allongées ou transverses, petites ou grandes. Sur le bord proximal du zoarium, elles reprennent le caractére membraniporoide mais avec une forme et une allure tout a fait distinttes de celles des zoécies normales. Toutes nos figures sont prises sur un méme zoarium de 4 cm. de longueur. 232 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. J'ignore si les avicellaires en sont réellement. Leur ouverture unique, entiére, rondo, ferait supposer qwils peuvent étre aussi bien des vibracellaires de la forme la plus simple et la plus élé- mentaire. L'observation est tres difficile sur des fossiles, car il y'y a ancune limite précise entre ces deux formes d'hétérozoécies. Je n'ai pas encore observé d'ovicelle. L'absence de cette cavité indique toujours quelque particularité anatomique intéressante. IT] faut attendre examen d'un plus grand nombre de spécimens pour la déconvrir. Localité.— Rocanéen de Río Negro (Coll. Coronel Antonio Romero). 15. Membranipora impressala, nov. sp. Pur des 2,1014, 50: Diagnose. — Zoarium assez grand, irrégulier, encroútant les pei- gnes et les huitres. —Zoécies dimorphes. 1. Zoécies cryptocystées, distinctes, trés allongées, séparées par la saillie de leur cadre, plus larges en avant, placées sur les mar- ges du zoarium. Cadre mince, tranchant, saillant. Cryptocyste un peu enfoncé, grand, légérement convexe, lisse, rectangulaire, por- tant aux quatre angles de petites fossettes plus ou moins profon- des. Opésie antérieure, elliptioue. , . [Lz=0,51 (Lo =0,28 Zoécie Opésie S |lz =0,26 - 0,28 llo =0,24 2.2 Zoécie normales pen distinctes, non séparées, allongées, trés rétrécies á la base, portant en bas deux fossettes linéaires, droites, profondes. Cadre trés mince, tranchant. Opésie antérieure, ovale ou subelliptique. Un petit denticule strié en bas de chacune. , . | Lz=0,40 -0,55 Lo ==0,33 Zoécie e Opésie E (lz =0,28 lo. 037 Variations. —Cette espéce est tres polymorphe. Elle est assez commune heureusement et il est facile d'en étudier les aspects variés. Le cryptocyste des zoécies marginales s'altere facilement sons CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 233 influence de Pirrégularité du bourgeonnement: il peut prendre la forme d'un triangle, d'un trapéze, d'un polygone irrégulier. Les zoécies normales sont placées entre les précédentes et Pan- cestrule. Leurs variations de forme sont peu importantes. Elles sont toujours plus courtes que les autres. Leurs cavités linéaires sont de grandeur variable et méme elles disparaissent quelque- fois. Quelques variations zoéciales rappellent des onychocellaires. Nous les voyons dans la figure 5. Cette méme fignre nous montre une zoécie ayant subi une régénération dans le sens antéro-pos- térieur. Quelques zoécies sont formées par une membrane calcaire, lisse, un peu convexe, enfoncée, rarement perforée. Leur nature nous est totalement inconnue. De méme que Membranipora trimorpha, cette espéce ne porte pas d'ovicelle. Localité.—Rocanéen de Roca (Col!. Coronel Antonio Romero). Genre RHAMPHONOTUS Norman, 1894. Grande opésie. Petit cryptocyste. Enorme avicellaire frontal. Type: Membranipora minax Busk. 16. Rhamphonotus Bassleri, nov. sp. PAY Elo6: Diagnose. — Petit zoarium encroútrant les huítres. — Zoécies pe- tites, peu distinctes, allongées, élargies en avant, amincies en arriere. Cadre mince, irrégulier. Cryptocyste rarement apparent. Opésie antérieure, ovale, la pointe en haut, souvent étranglée latéralement dans le tiers supérieur. — Ovicelle grande, saillante, elobuleuse, lisse, couchée sur lectocyste de la zoécie supérieure, s'ouvrant dans la zoécie.—Avicellaire frontal, grand, saillant, obli- que, tres irrégulier, s'ouvrant obliquement sans orientation bien nette. Souvent un petit avicellaire interzoécial pointu, losangique. Zoseso L2=0,88-0,87 ¿.. fLo=0,18 18 ; ) 0 18 o og 0,09= 0:15 234 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Aftinites. — Cette espece est beaucoup plus petite que Rham- phonotus minax Busk. J'ai pu faire la comparaison spécimen á spécimen et les différences sont considérables. Notre spécimen malheureusement v'est pas tres bon. Il offre surtout de grandes difficultés de photographie tant par sa position que par sa couleur. Ánssi, sur notre figure, les avicellaires frontaux ne sont pas assez visibles. Mais notre assimilation générique est parfaitement exacte. Je dédie cette espece á Y. Bassler, du Muséum de Washington, en remerciement des matériaux de comparaison qu'il a bien voulu me communiquer. Localité. — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Genre PYRIPORELLA Canu, 1910. Zoécies pyriformes. Ectocyste convexe. Cryptocyste partielle- ment calcifié. Ovicelle hyperstomiale. Vibracellaires. Cónomanien, —Actuel. Type: Pyriporella Ameghinoi, Cann. En 1900 [37], p.382 J'ai classé dans le genre Pyripora d'Orbigny des especés qui ne doivent pas y figurer. La diagnose du célébre paléontologiste frangais est rigourense. Elle ne s'applique qu'aux espéces á zoécies non contigués et dépourvues d'hétérozoécies. Pour un ensemble de formes, d'ailleurs voisines, appartenant incontestablement á un méme genre, je fais aujourd'hui le genre Pyriporella. Les espécos connues de ce genre sont. Flustrellaria Franquna d'Orbigny. Campanien. Vibracella confluens Canu. Eocéne, Miocéne. Escharina confluens Reuss. Cénomanien, Turonien. Membramipora confluens Waters. Tertiaire d'Australie. Membranipora pedunculata Manzoni. Sicilien. Membranipora pedunculata Hincks. Actuelle, Ceylan. Pyripora crassa Mac Gillivray. Actuelle, Australie. Les cing derniéres espéces ont été confondues en une senle, sous le vocable de M. confluens, par Miss Jelly dans son Catalogue [33], p. 146. Les vibracellaires ne sont pas identiques dans ces différentes espéces: ils varient en forme et en grandeur. Ce phénoméne s'explique par la grande extension géologique du genre. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 235 17. Pyriporella Ameghinoi, nov. sp. Pl. 1v, fig. 8, 9. Diagnose.—Zoarium orbiculaire, encroútant les huítres.—Zoécies distinctes, séparées par un large et profond sillon, allongées, trés amincies en arriére, Ectocyste petit, convexe, lisse. Cryptocyste tres élargi á la base, finement strié. Opésie pyriforme, la pointe en haut, antérieure, finement crénelée. — Ovicelle petite, trés salllante, globuleuse, lisse, ne s'ouvrant pas dams la zoécie.— Vilracellaire petit, ectocystal, en bas de chaque zoécie, a ouverture ovale la pointe en bas. eoscio | L2=0449-0,62 . (Lo=0,22-0,24 oecl esIe M0 1033 0 04d Vibracellaire =0,05 -0,07 Ovicelle, h=0,13 Variations. — Les zoécies sont plus petites au voisinage de l'an- cestrule. Celle-ci est membraniporoide. Les opésies sont un pen plus allongées sur le bord distal du zoarium. Les avicellaires sont assez constants. Cependant il n'est pas rare d'en trouver deux et méme trois sur une méme zoécie, Aftinités. — C'est á peu de chose pres Plustrellaria Frangana d'Orbigny [40], pl. 125, fig. 13-16, du Campanien francais, Cepen- dant celle-ci est plus petite et ne porte pas de vibracellaire constant. Elle différe encore de Vibracella confluens Canu [38], p. 31, pl. v, fig. 2-4, du Lutécien frangais par ses mesures plus grandes, ses vibracellaires non auriculés, ses ovicelles plus grandes et plus globuleuses. Je dédie cette magnifique espéce á M. Fl. Ameghino dont V'in- lassable amitié m'a permis d'étudier et de publier les remarquables espéces décrites dans les deux parties de la présente Iconographie. Localité. — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 236 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 18. Pyriporella confluens Reuss, 1846. Plystis 10 Ads 1846. Escharina confluens A. E. Reuss. Die Versteinerungen der bóhmischen Kreideformation. Zweite Abtheilung. Stutt- gart, 4to, p. 68, pl. 15, fig. 22. 1852. Membranipora pustulosa D'OrBIGNY [40], Bry. Crét., p. 547, pl. 128, fig. 16-17. 1852. Reptoflustrella cenomana D'OrBIGNY [40], Bry. Crét., p. 570. 1852. Membranipona Frangana D'OrBIGNY [40], Bry. Crét., p, 551, pl. 729, fig. 1, 2. 1862. Membranipora abortivca GabB Er Horw [31], Polyzoa North-America, p. 157, pl. 20, fig. 41. 1874. Membranipora confluens Reuss. Die Foraminiferen, Bryozoen, Ostracoden des Pláners (mittlere und obere Qua- der). In Geinitz, Elbthagebirge in Sachsen. Paleontographica, p. 129, pl. 24, fig. 14. 1877. Membranipora confluens Novak Beitrag zur Kenntniss der Bryozoen des Bohmischen Kreideformation. Denkschrif- ten der math. natur. Classe der k. Akademie der Wissenschaften, XXXVII, p. 19, pl. 1, fig. 17-18. 1900. Pyripora confluens F. Caxu [37], Rév., d'Orb., p. 383. Observations. — Les spécimens de l'Argentine ne sont pas trés bien conservés, mais je suis certain de ma détermination. Je pos- sede cette espece dans ma Collection et j'ai pu faire toute compa- raison utile. Les mesures micrométriques sont les suivantes: , . [| Lz=0,37 - 0,40 Zoécie E llz =0,25-0,29 Ovési Lo = 0,22 - 0,25 27 00 18006 Elles rentrent parfaitement dans les dimensions de l'espéce européenne. Variations. — Les zoécies sont pyriformes, séparées par un pro- fond sillon. La différence entre le cryptocyste et l'ectocyste n'est visible que sur les spécimens trés bien conservés. Ils se confondent par la moindre altération fossilifére. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 237 Les vibracellaires ne sont pas constants dans leur position: 1l y a des zoécies qui en sont dépourvues, par suite de Jl'irrégularité du bourgeonnement. Intercalés entre les zoécies, ils en ont la forme ovale: arrondis et élargis en avant, tres amincis en arriére. De plus leur longueur est tres variable: trés courbs sur nos spéci- mens argentins, ls s'allongent considérablement et deviennent fréquemment presque aussi grands que des zoécies: c'est précisé- ment le cas du spécimen figuré par Gabb et Horn. Les zoécies régénérées ne sont pas rares: elles sont alors bouchées par une lamelle perforée: c'est la régénération inverse. Affinités. — Cette espece diftere de Pyriporella Ameghinoi par la réduction considérable de son cryptocyste, et par ses avicellaires moins constants mais plus gros. Elle n'est pas á confondre non plus avec Flustrellaria pustulosa d'Orbyeny [40], pl. 725, fig. 22-25, du Maestrichtien francais, la- quelle espéce est ornée d'épines aréales et comporte des dimensions plus grandes. Localités.— Rocanéen de Río Negro et de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero) Distribution géologique.— CÉNOMANIEN de France et d'Allema- gne. TuRONIEN d'Allemagne. CONTA CIEN de France (Coll, Canu). CAMPANIEN de France. MAESTRICHTIEN OU DANIEN du New Jersey. 19. Pyriporella Filliozati, nov. sp. Ab a Ia e Diagnose.— Petit Zoarium sub-flabelliforme.— Zoécies petites, pyriformes, peu amincies en arriére, distinctes, allongées, séparées par un sillon profond. Cryptocyste petit, élargi par en bas, trés finement granulé. Ectocyste lisse, convexe. Opésie antérieure, allongée, ovale on elliptique.— Vibracellairesintercalés, tres allon- gés en zoéciules, á petite onverture elliptique. Lz =0,31-0,34 Lo =0,14- 0,16 obvia, e Opésie | Pp a |lz =0,20 -0,22 | lo =0,07-0,09 E E E SS 10race LLO: zo 0,09 0.18 238 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Affinités.— Cette espece est beaucoup plus petites que Pyriporella confluens et que Pyriporella Ameghinoi. Ses vibracellaires, assez constants par leur forme, sont assez rares. Le cryptocyste ne se distingue guere de l'ectocyste qu'a de forts grossissements. La régénération totale s'observe rarement: une polypide normal suc- cede a un polypide normal, et la zoécie parait simplement porter un double cry ptocyste. Je dédie cette espece a mon excellent ami, M. Filliozat, de Ven- dóme, en souvenir des bonne journées d'étude passées ensemble. Localité.— Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Fam. ONYCHOCELLIDAE J. JuLuren, 1891. Cryptocyste calcifié. Opésie distincte de l'ouverture vrale ou apertura. Hétérozoécies représentées par des onychocellaires dans les formes primitives et par des avicellaires dans les formes plus récentes. Bibliographie anatomique.—1881. JuLLien. Note sur une nouvelle division des Bryozoaires cheilostomiens. Bull. Soc. Zool. France, t. vr, p. 7.—1900. F. Canu (37, p. 385].--1909. Levissex Morphological and systematic studies on the Cheilosto- matous Bryozoa Copenhague, 4to, p. 153, pl. xxtr, fig. 3, pl. xxIv, fig. 10. En 1900, je n'avais pas cru devoir adopter les genres 4Agiva et Ogivalia de Jullien. C'est qu'en effet, á cette époque, il s'agissait de faire admettre dans la nomenclature le genre Onychocella que plusienrs auteurs s'obstinaient á ne pas reconnaítre. Aujourd'hui, il est universellement admis et, récemment méme, dans la famille, Levinsen a introduit un nouveau genre. Dans ces conditions nous croyons devoir modifiernotre publication de 1900 et nous en réfé- rer aux définitions exactes de J. Jullien. Il faut done introduire dans la famille des Onychocellideés les nouveaux genres sulvants: Onychocella. Opésie subtrifoliée, a levre inférienre saillante. Ogiva. Opésie elliptique. Ogivalia. Opésie semilunaire. Membranicellaria. Levinsen, 1909. Opésie elliptique entourée d'un bourrelet sailllant. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 239 Gen. ONYCHOCELLA J. JuLtienN, 1881. Zoécies hexagonales. Cryptocyste plan. Opésie subtrifoliée Ony- chocellaires généralement falciformes. Bathonien—Actuel. Type: Onychocella angulosa Reuss. Les deux échancrures de lopésie sont destinées au passage des muscles moteurs de la valve operculaire. 11 ne faut pas les confon- dre avec des échancrures analognes qui, dans la famille des Micro- poridées, laissent passer des fibres s'attachant á Vectocyste flexible, C'est alnsi que Rossehana Canui Filliozat* est un véritable Ony- chocella; je suis d'ailleurs coupable de la fante car elle a été faite a mon instigation. Les échancrures latérales dans Onychocella sont irreguliéres, rare- ment symétriques. Celles de Rosseliana, de Fargantua, quí sont des opésiules, sont réguliéres, symétriques, constantes. De plus, dans ces derniers genres, les onychocellaires présentent des perfo- rations au dessous de leur opésie ce qui les transforme en hétéro- zoécie spéciale que j'al appelée réticulocellaire. Gen. OGIVALIA J. JuLLteN, 1881. Opésie semielliptique. Zoécies arrondies en avant. Onychocellai- res de formes diverses plus ou moins constants. Turonien— Actuel. Type: Vincularia elegans d'Orbigny 1838. 20. Ogivalia brevis, nov. sp. Aro) Diagnose.—Tres petit Zoarium encroútamt les Membranipores. — Zoécies hexagonales trés peu allongées, distinctes séparées par un petit filet saillant. Cryptocyste peu profond, plan ou concave. Opésie antérieure, transverse, semilunaire.—Onychocellaire droit ou un peu falciftorme.— Ovicelle inconnue . | Lz =0,81- 0,40 Zoécie ml Opésie |lz =0,26-0,27 E ¡ Lo =0,07 -0,09 Me == 09 =048 1 1998. M. FintiozaTr. Nouveaux Bryozoaires cheilostomes de la craie. Bull. Soc. Géclogique France, 4.? série, t. vir, p. 5353, pl. xmm, fig. 6. 940 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Affinités.—Cette petite espece est voisine de Onychocella irreg u- laris Hagenow, du Maestrichtien belge. Mais cette derniére porte de trés grands avicellaires tres typiques. Elle est plus longue que Oyivalia Theringsiana dont Vopésie d'ailleurs est terminale. Notre spécimen entoure lancestrale de sorte que les zoécies n'ont pas le caractere arrondi observé généralement dans le genre. Localité. — Rocanéen de Rio Negro (Coll. Coronel Antonio Romero). 21. Ogivalia Iheringsiana, nov. sp. Pl. y, fig. 4. Diagnose. — Petit Zoarium encroútant les Membranipores. — Zoé- cies distinctes, séparées par une créte saillante et tubéreuse, allon- gées, un peu rétrécies en arriére. Cryptocyste tres peu profond, plan ou légéerement convexe. Opésie terminale, semilunaire, un peu transverse.— Onychocellaire droit á pointe supérieure un peu saillante et grande opésie elliptique.—Ovicelle petite, transv erse, assez saillante, avec une ouverture bordée d'un bourrelet. SS UL Zoécle |lz =0,27-0,31 ovésio [Lo =0,09-0,11 JesIie Eo 00 O EA | Le =0,40 Lo = 0,18 nychocellaire pela 0,20 lo 0/09 Afiinités. —Cette espece diftéere de Ogivalia brevis par ses zoé- cies plus allongées, deux fois plus longues que larges. Je la dédie au Dr. Ihering de Sao Paulo, quí a fait tant de tra- vaux importants sur 1'Amérique du Sud. Localité. — Rocanéen de Rio Negro (Coll. Coronel Antonio Romero). 22. Ogivalia Hennigiana, nov. sp. Pl. y, fig. 7. * Diagnose. —Zoarium irrégulier, a bourgeonnement linéaire, en- croútant les huitres.—Zoécies distinctes séparées par un sillon trés peu profond, tres allongées, arrondies et saillantes en avant, non CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 29241 , , o EA , ÍA a: rétrécies en arriére. Cryptocyste peu enfoncé, convexe. Opésie ter- minale, allongée, semielliptique. E ¡ La 0,87 o Lo =0,14-0,16 A sn E o =0.1320.20 Variations. —Cette espéce est trés irréguliére. Nos mesures mi- crométriques indiquent des variations considérables surtout en largeur. Le bord inférieur de Popésie est souvent ondulé comme dans le genre Onychocella oú elle pourrait peut-étre se classer. Nous ne connaissons pas son ovicelle et je n'ai pas observé d'ony- chocellaire. Par ses zoécies presque rectangulalires elle différe nettement de Ogivalia Iheringsiana précédemment décrite. Je dédie cette espéce au Dr. Henning, de Lund, en Suéde, qui a publié de trés beaux travanux sur les Bryozoaires fossiles. Localité.— Rocanéen de Río Negro (Coll. Coronel Antonio Romero). 23. Ogivalia indistincta, nov. sp. 1841 y, er le Diagnose.—Zoarium irrégulier, encroútant les huítres. — Zoécies indistinctes allongées, arrondies en avant, trés rétrécies en arriére. Cryptocyste convexe, granuleux. Opésie terminale, semilunaire, transverse.—Ovicelle et Onychocellaire inconnus. Lz =0,64-0,74 . (Lo =0,11-0,13 Desi) lz 0,46 A e Zoécie Localité —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 24. Ogivalia galeata, nov. sp. 120 56 1ateoo all. Diagnose .—Zoarium bilamellaire, libre, formé de deux lamelles adossées.—Zoécies indistinctes, non séparées. allongées. Cadre épais. Cryptocyste enfoncé, lisse, un peu concave. Opésie petite, 949 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. enfoncée, semilunaire, transverse. — Ovicelle volumineuse, incom- pléte, saillante, formant une sorte de visiére au-dessus de son ouverture tres grande, nettement séparée latéralement de la zoécie par un petit sillon. A | Lz = 0,55 e ¡ Lo =0,07 Zoéclie é Opésie y lz"=037 llo =0,14 Observations. —La séparation tres nette entre la visiere et la zoécie parait indiquer que la premiere est formée d'un tissu différent: c'est donc le sparganile incompletement calcifié. La grande ouverture ovicellarienne et cette visiére devaient donc étre recouvertes par le coitis (ou ectocecium) entiérement membraneux. Aftinités.—Il faut rapprocher de cette espéce 1'Escharinella ele- gans dOrbigny [40], pl. 683, fiig. 11-13, du Campanien francais. Elle s'en distingue par son ouverture ovicellarienne beaucoup plus grande que l'opésie. Il conviendrait peut-étre de réunir ces deux espéeces dans un genre nouveau. Mais je crois qu'il est prudent d'attendre la récolte de matériaux plus abondants et mieux conservés, l'unique spéci- men argentin étant insuffisant. Localité.— Rocanéen de Río Negro (Coll. Coronel Antonio Romero). Gen. AMPHIBLESTRUM Gray, 1848. Cryptocyste devélopé. Opésie trifoliée (quelquefois semiellipti- que ou subronde). Avicellaires ectocystaux on intercalés entre les zoécies. Souvet des épines aréales et orales. Type: Amphiblestrum Flemingú Busk. Ce genre ne différe de Onychocella que par le remplacement des onychocellaires par des avicellaires. Ce caractére n'est pas essen- tiel: c'est un perfectionnement naturel dans la descendance géné- rale. Nous pouvons admettre cependant les deux genres a cause de la signification trés précise donnée par J. Jullien a son genre et aussi pour faciliter les déterminations. Enfin la présence des épines quí n'ont pas encore été signalées dans le genre Onychocella peut étre prise en considération comme terme de différenciation,. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 243 25. Amphiblestrum Harmeri, nov. sp. IA e ad: Diagnose.—Zoarium a bougeonnement linéaire, encroútant les huitres.—Zoécies irréguliéres, distinctes, séparées par un petit sillon peu profond, allongées, arrondies et élargies en avant, un peu rétrécies en arriere. Cryptocyste grand, peu profond, plan, légérement granulé. Opésie terminale subtrifoliée ou subronde, allongée ou tranverse.—Avicellaires rares et tres petits. —Ovicelle Inconnue. A | Lz 0,83 - 0,40 Ay Zoécie / Opésie |lz =0,27 -0,33 ¡Lo =0,11-0,27 lo =0,15-0,25 Variations.—Cette espéce est tres irréguliere et les mesures micrométriques n'ont que peu d'importance. Les zoécies primosé- riales sont plus larges que les autres, et les deux zoécies qw'elles engendrent sont au contralre extrémement réduites. Pres de Pancestrule les opésies sont transverses; leur bord infé- rieur est convexe et porte latéralement deux grandes échancrures irrégulieres destinées au passage des muscles operculaires. Vers le bord distal du zoarium les opésies sont beaucoup plus grandes, allongées, subrondes ou elliptiques. Ces variations opésiales mon- trent le peu d'importance spécifique et générique qu'il faut atta- cher a la forme de l'opésie quand elle n'est pas géométrique eb tres constante. Le bourgeonnement est régulier car il se fait presque exclusive- ment par le dédoublement de la septule distale des zoécies primo- sérlales. Le zoarium, dans son ensemble, doit prendre un aspect flabelliforme. Les avicellaires sont rarissimes; je n'ai pu observer réellement leur nature, de sorte que la position générique de cette espece reste douteuse. Je la dédie a M. Harmer, du British Museum, dont les patientes recherches microscopiques sur les Bryozoaires sont devenues clas- sigues, et en souvenir de nos longues et amicales relations scienti- fiques. Localité, — Rocanéen de Río Negro (Coll. Coronel Antonio Romero). 944 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 26. Amphiblestrum subpapillatum, nov. sp. 1 aaa 10) 10 L. Diagnose.—Zoarium irrégulier encroútant les Membranipores.— Zoécies distinctes, séparées par un sillon peu profond, allongées, arrondies en hant, élargies au milieu, rétrécies en arriére. Crypto- cyste peu enfoncé convexe, lisse. Opésie terminale, allongée, sub- elliptique, a bord crénelé.—Avicellaires petits, intercalés dans les angles interzoéciaux, triangulaires, la pointe en bas, á ouverture divisée en deux parties par un petit trabécule.—Ovicelle inconnue. Lz —0,52 - 0,59 . (Lo=0,30 -0,35 Zoécie | Opésie ; lo —0,19-0,26 llz 0,30 -0,36 Variations.—Ces dimensions micrométriques sont celles des zoé- cies normales; mais il y en a de beaucoup plus petites. Nos deux figures, prises sur un méme zoarium montrent bien P'importance de ces variations de grandeur dont la cause réside le plus souvent dans Virrégularité du substratum. Le sillon séparatif disparait souvent. Le cryptocyste est oblique et plonge toujours vers l'opésie. L'avicellaire est saillant ou non salllant. Enfin Popésie est souvent ovale, la pointe en haut. Beaucoup de zoécies portent autour de Popésie une sorte de cal- losité irréguliere tres élargie a la base: c'est un autre cryptocyste. Un polypide normal a succédé, dans la méme zoécie a un autre polypide normal. C'est un cas de régénération dans le seus normal. Enfin, notre figure 10 montre une zoécie modifiée en onycho- cellaire d'un type spécial qui se rencontre un peu dans tous les genres de la famille des Onychocellidées et méme dans celle des Membraniporidées. Affinités.—Par ses dimensions cette espece se raproche beaucoup de Amphiblestrum papillatum Bush [3], p. 66, pl. 33, fig. 1, de Ma- nille; cependant elle en difféere par son zoarium encroútant et non libre et par son cryptocyste plus développé. Elle differe de Reptoflustrella heteropora Gabb et Horn [31], p. 162, pl. 20, fig. 50, du Danien du New Jersey, par la rareté de son avicellaire non placé sur le péristome de lopésie et par l'ab- sence de deux ondulations latérales sur le bord inférieur de Popésie. Localité.—Rocanéen de Río Negro (Coll. Coronel Antonio Ro- mero). CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 245 Gen. EURITINA. Canu, 1900. Cryptocyste présentant des facettes pres de Popésie et formant ainsi deux sortes de gouttiéres linéaires et latérales *' Onychocel- laire, dans les espéces anciennes; avicellaire dans les especes plus récentes. Turonien.—Actuel. Type fossile: Eschara Eurita d Or- bigny; type actuel: Membranipora trifolium, var. minor Hincks. Dans le groupe des espéces anciennes, quand deux zoécies naissent d'une autre, il y ena toujours une qui est modifiée en onychocellaire droit peu différencié; de plus il n'y a jamais d'ovi- cellaire comme dans le groupe des especes récentes. Cependant en 1900, je n'al pas hésité a classer les unes et les autres dans un méme genre, car les avicellaires succedent toujours aux onycho- cellaires dans la descendance générale. Aujourd'hui, j'al la pleine confirmation de la justesse de cette interprétation, Euritina inter- media reliant les deux groupes d'espéces. C'est pour la méme raison d'ailleurs que j'al choisi le nom de Luritina, sans significa- tion morphologique précise, afin d 'éviter la création de deux genres distincts. Je ne nvexplique pas encore bien la signification des denx rai- nures latérales; mais elles existent avec une constance si remar- quable que nous sommes forcés de considérer leur présence comme fondamentale. 27. Euritina lata, nov. sp. Blisy, 41919: Diagnose.—Zoarium grand, irrégulier, encroútant les pectens.— Zoécies tres distinctes, séparées par un sillon profond, grandes, larges, tres amincies en arriéere. Cadre entier, mince, régulier, granulé. Cryptocyste occupant la moitié de l'area frontal, oblique, plongeant vers l'opésie, un peu convexe, granulé. Opésie terminale, ovale, a levre inférieure tres finement denticulé.—Ovicelle tres petite, globuleuse, saillante ne s'ouvrant pas dans la zoécie, a sparganile calcifié.— Avicellaires petits, elliptiques, un peu sail- 1 C'est ce que j'ai souvent qualifié de eryptocyste prismatique dans mes publi- cations antérieures. Anar. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. x1v. Mayo 26, 1911. 16 946 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. lants, la pointe tournée en haut, intercalés dans un trés petit espace au-dessus de chaque opésle. Zoo / Lz =0,55 - 0,64 Ovési ¡ Lo = 0,22 - 0,24 oécie sie Mz. =087 A OE Avicellaire, Lz=0,09 - 0,11 Ovicelle, ho = 0,09 Affinités.—Cette espece ressemble beaucoup au Membranipora trifolium var. minor Hincks, vivant a Bahia et a Tahiti. Elle en differe par son opésie plus grande, par ses deux facettes latérales beaucoup moins accentuées et par son cadre saillant tres distinct. Elle differe de Reptoflustrella heteropora Gabb et Horn [31], p. 162, p1.20, fig. 50, du Danien du New Jersey, par ses dimensions plus grandes et surtout par la présence de ses facettes. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 28. Euritina elongata, nov. sp. Pl. y, fig. 8. Diagnose.—-Zoarium encroútant les huitres. —Zoécies distinctes; separees par un sillon peu profond, tres allongées, peu rétrécies en arriére. Cadre peu saillant. Cryptocyste occupant plus de la moitié de la longueur zoéciale, tres peu profond, convexe, a facettes latérales trés petites, tres finement granulé. Opésie terminale, allongé, elliptique.— Avicellaire intercalé, petit, triangulaire, trans- verse, la pointe tournée vers l'axe zoécial. Lz =0,59-0,74 Zoécie Ovósio | Lo =0,27 - 0,88 [la =0,85 -0,37 p a ei Variations.—Le spécimen figuré présente plusieurscas derégéné- ration du polypide. Les zoécies ont alors un double cryptocyste,. le second figurant alors une sorte de callosité, élargie á la base, autour de lopésie diminuée de grandeur. Un polypide normal a. done succédé á un autre polypide normal dans la méme zoécie. Aftinités.—Cette espéce se rapproche beaucoup, par sa forme zoéciale de Eschara Eurita 'Orbigny [40], p. 174, pl. 678, fig. 6, 8,. du Sénonien francais. Elle s'en distingue par la présence de ses. avicellaires et par ses dimensions un peu plus grandes, CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 9247 Elle se distingue de Euritina lata par ses zoécies beaucoup plus allongées et par ses avicellaires, plus grands. Ces derniers mesu- rent en effet 0,16 de longueur. Localité —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 29. Euritina intermedia, nov. sp. 12 y, ateos le Diagnose.—Zoarium flabelliforme, a bourgeonnement linéaire, encroútant les huitres.—Zoécies distinctes, séparées par un sillon profond, allongées, rectangulares, arrondies en haut, trés peu ré- trécies á la base. Cadre mirce, rond, saillant surtout en avant. Cryp- tocyste concave ou convexe, peu enfoncé, tres finement grenu, occupant la moitié de Parea frontal. Opésie terminale, allongée, semielliptique. — Avicellaires petits, elliptiques, logés dans les espaces triangulaires interzoéciaux.—Ovicelle inconnue. EE Lz = 0,27 - 0,33 ies Lo = 0,13 -0,16 E 0185026 Do 018 Ona Variations.— Au voisinage de l'ancestrule, les zoécies sont natu- rellement plus petites et plus étroites; les zoécies primosériales sont plus volumineuses: elles engendrent deux petites zoócies déformées dort une présente quelquefois un aspect onychocelli- forme; enfin il n'ya pas d'avicellaire. C'est l'aspect zoécial ordi- naire des espéces anciennes. Dans la région distale du zoarium, les zoécies sont plus grandes, plus étaleés et il ya des avicellaires, comme dans les espéces plus récentes du genre. C'est donc bien une espece intermédiaire. Nous avons observé quelques zoécies monstrueuses dont la pré- sence est due peut-étre a lirrégularité du substratum. Aftinités.— Cette espéce se rapproche beaucoup de Kuritina Welshi Canu [37], p. 411, pl. vr, fig. 18, 19 du Turonien frangais; elle en a le bord droit opésial. Elle en différe par ses zoécies margina- les étalées, distinctes, séparées par un profond sillon, et par ses petits avicellaires elliptiques. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 248 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Gen. COSCINOPLEURA Marsson, 1887. Opésie non terminale, semilunaire, avec deux petites echancru- res latérales. Zoécies marginales poreuses; munies d'une languette salllante au-dessus de l'opésie*. Cénomanien ou Thanetien.— Type: Eschara elegans Hagenow. 30. Coscinopleura planulata, nov. sp. ElAvL 1 S506. Diagnose.—Zoarium libre, a deux lamelles adossées.—Zoécies distinctes, séparées par une petite crete saillante, grandes, allon- gées, hexagonales, rétrécies eu haut et en bas. Cadre tres mince et peu saillant. Cryptocyste, plan, granuleux, peu enfoncé. Opé- sie antérieure, semilunaire, transverse, a échancrures latérales a peine visible.—Onychocellaires, tres grands, minces, fusiformes, á pointe saillante au dessus du plan zoécial supérieur, á opésie mé- diane, allongée et étranglée latéralement.—Ovicelle inconnue. doccio |L2=0,66-0,74 ena] Lo =0,09=06d oecie Ssl60 ; “90 )z =0,29 -0,46 A PEE Va o O ¡ Lz =0,46 - 0,55 nychoce e —0,18-0,22 Affinités.—L'unique spécimen du Musée de Buenos Aires est incomplet: les zoécies marginales r'existent pas. Cette espece différe de Eschara elegans Hagenow, du Campa- nien de Rugen, par ses zoécies planes, par la présence de ses ony- chocellaires et par son opésie plus étroite. Elle differe encore de Echara digitata Morton 1834 du Danien et du Thanetien du Maryland, par ses grandes dimensions et son opésie beaucoup plus transverse. Par la nature, la forme et la grandeur de ses onychocellaires, elle est tres différente de Coscinopleura Brydone:. 1 Sur la fonction de cette languette voir l'hypothése de FiLiiozatT: Bull. Soc. Geól. France, 4.* série, t. vir, p. 557, 1908. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 249 Localité. — Rocanéen de Río Negro (Coll. Coronel Antonio Romero). 31. Coscinopleura Brydonei, nov. sp. EIA: Diagnose. — Zoarium libre, á deux lamelles adossées. — Zoécies distinctes, séparées par un sillon trés peu profond, arrondies en avant, rétrécies en arriére. Cadre tres large, peu distinct, granulé. Cryptocyste, assez profond, oblique vers Popésie, tres réduit en arriére. Opésie antérieure, semilunaire, transverse, avec deux sinuosités latérales.-—Onychocellaire droit, losangique dont l'opésie est ovale et antérieure. Zoteio | 12=0,55-0,64 onésio | Lo =0,09 0ec esle 00) la =0,87 =D e A La =0.37 /1 nyoe ocellalre la 04 Affinités. —Cette espece se distingue de Coscinopleura planulata, non seulement par ses dimensions plus réduites et par son cryp- tocyste profond, mais encore par la forme totalement différente de son onychocellaire. Je dédie cette espéce á mon savant confréere etami M. Brydone de Londres qui nous a déja donné d'importants travaux sur les Bryozoaires crétacés. Localité. —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Fam. OPESIULIDAE J. JuLLIieEN. Bibliographic anatomique.—1886, J. JuLren, Mission scientifique du Cap. de Horn, Bryozoaires, vol. 6, pl. 14.—F. Caxu, Révision des Bryozoaires du Cré- tacé figurés par d'Orbigny, Bull. Soc. Géol. France, (3), t. xxvrItt, p. 422, fig. 39. Gen. MICROPORA Grax, 1848. Opésiules latérales perforant le cryptocyste. Réticulocellaire. Cénomanien.—A ctuel. Type: Flustra coriacea Esper. 250 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 32. Micropora convexa, nov. sp. Pia loa o: Diagnose.—Zoarium encroútant les huitres.—Zoécies distinctes, séparées par un sillon, peu allongées, ventrues, subhexagonales. Cadre particulier, tres peu saillant, incomplet. Cryptocyste con- vexe, tres finement granulé, portant quelques gros pores écartés. Opésie petite, terminale, presquet ransverse, semilunaire, á péris- tome épais, salllant. Opésiules tres petites, toujours placées dans angle du péristome et du cadre. , . [Ez=0,51-0,55 en Zoécie Opésie |lz =0,37 -0,50 ¡Lo =0,09 lo =0,09 Variations.—Les pores frontaux sont fréquemment oblitérés eb le cryptocyste parait absolument lisse. Le cadre n'occupe que la moitié supérieure de la zoécie; 1l s'atté- nue avec une grande facilité par fossilisation. Les opésiules sont si petites qu'elles sont presque toujours bouchées; mais leur existence est indubitable. Aftinités. —Cette espece differe de Micropora brevissima Waters, des régions subantarctiques, qui est orné des mémes ponctuations, par ses mesures plus petites et par son opésie non transverse. Localité —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Commun. Fam. COSTULIDAE J. JuLtxeN, 1886. Bibliographie anatomique.—1886. J. Jurren. Les costulidées, nouvelle famille de Bryozoaires. Bull. Soc. Zoologyique de France, t. x1, p. p. 1-20, pls. xvin-xx.— 1888. J. JuLLien. Du testicule chez la Lepralia figularis et des variétés de cet organe chez les Bryozoaires en général. Memotres Soc. Zoologique de France, t. 1, pp- 1-3, pl. x.—1900. F. Canu. Révision des Bryozoaires du Crétacé figurés par dVOrbigny. Bull. Suc. Géol. France, 3+ série, t. xxvr, p. 440, fig. 53. —1903. S. Harmer. On the morphology of the Cheilostomata. Quot. Journ. Micr. Sc., nm. s. vol. 46.—1903. Caxon Norman. Zocecium building in Cribrilinidae. Ann. Mag. Nat. Hist., s. 7, vol. xt, pp. 90-104, pls. vrir, 1x.—1909. Levisen. Morphological and systematic studies on the Cheilostomatous Bryozoa, Copenhague, 4to., p. 156, pl. 1x, fig. 9-11. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 251 Gen. MEMBRANIPORELLA Snmrrr, 1872. Costules libres, fixées seulement par leur extrémité dans l'axe médian zoécial. Sénonien actuel. Type: Leporalia nitida Johnston. 33. Membraniporella capitata, nov. sp. Bl ya le. 259» Diagnose.—Zoarium orbiculaire encroútant les huítres.—Zoécies distinctes séparées par un sillon peu profond, allongées, tres élargies en haut. Cadre assez épais, lisse. Dix costules attachées á une saillie linéaire médiane, séparées par des intervalles aussi larges. Deux gros avicellaires oraux placés sur le péristome. Apertura terminale tres grande, subronde avec un bord inférieur droit. Ovicelle immense, globuleuse, tres saillant ornée de petites perforations plus grandes sur les cótés, s'ouvrant au-dessus de lPopercule. Lz =0,37 -0,42 De =D SO IE Apertura | lz =0,18 - 0,24 Zobci oécie Me 010 == 09 Ovicelle | á )1 =0,27 - 0,33 Variations.—Les zoécies son naturellement plus petites au vol- sinage de l'ancestrule. Celle-ci est aussi costulée. La grandeur de apertura est remarquable; la surface qu'elle couvre est souvent plus grande que celle des costules frontales. Les deux avicellaires sont trés constants; ils donnent aux cellules laspect d'une téte de clon. Les ovicelles sont d'une grandeur peu commune dans les Chei- lostomes. Son ouverture spéciale mesure environ 0,05 de hauteur. Affinités.—Cette espéce rappelle beaucoup Escharipora Abboti Gabb et Horn [32], p. 149, pl. 20, fig. 35, du Danien du New Jer- sey. Elle en différe par son ovicelle plus grande, par sa frontale plus étroite et par un plus grand nombre de costules. Elle différe encore de Escharipora distans Gabb et Horn [32], p. 148, pl. 20, fig. 32, du Danien du New Jersey, par son zoarium 259 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. encroútant, par ses avicellaires oraux plus gros, par son orifice beaucoup plus large et par son ovicelle plus large que hante. Localité.—Rocanéen de Rio Negro (Coll. Coronel Antonio Ro- mero). Gen. CRIBRILINA Gray, 1888. «Zoécies dont la frontale est formée par des cótes aplaties plus ou moins en relief sur la surface extérieure; ces cótes sont reliées entre elles par de petites traverses intercostales; qui produisent, dans les sillons intercostaux, une ligne de ponctuations plus ou moins nettes mais constantes. Orifice semicirculaire, occupant une surface toujours plus petite que celle recouverte par les cótes, a lévre inférieure droite, a levre supérieure portant, chez les jeunes zoécies, de deux a six épines, ces nombres varient sur le méme zoarium. Avicellaires a situation variable.» (J. Jullien). Cénoma- nien--Actuel. Type de Gray: Lepralia punctata Hassall. Type de J. Jullien: Eschara radiata Moll. 34, Cribrilina insignis, nov. sp. PY O 9 LOs Diagnose. —Zoarium petit, irrégulier, fragile, encroútant les hui- tres.—Zoécies tres grandes, distinctes, séparées par un sillon profond, tres allongées, fusiformes, convexes. Seize á vingt costu- les attachés au bord ectocystal et, sur la ligne médiane, á une sorte de plastron fusiforme, perforé irrégulierement, disposé dans toute la longueur de la zoécie. Traverses intercostales trés petites, tres fragiles. Apertura terminale, semilunaire, transverse, á péristone mince et non saillant, á poster droit, saillant, épaissi. Avicellaire oral peu constant, elliptique, plus ou moins allongé. Ovicclle inconnue. Zoteio [E2=092-1,08 [La =0,11-0,14 2 ]le =0/27-0,87 E Ma 0 160/18 Variations.— Les dimensions zoéciales sont tres variables; c'est alnsi que sur l'une de nos figures il y a une zoécie qui atteint 0,50 de largeur. Dans ces zoécies élargies, le plastron médian n'est plus CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARG£NTINE. 253 linéaire: il devient elliptique ou orbiculaire. Mais, dans les deux cas, ses perforations sont placées dans le prolongement des espa- ces intercostulaires. Les petites traverses intercostales sont si fragiles qu'elles sont rarement conservées: alors les spécimens offrent l'aspect des Mem- braniporella. L'ectocyste zoécial auquel s'attachent latéralement les costules est plus ou moins développé, comme dans le genre Figularia dont cette espéce présente plusieurs caracteres. Il est lisse, et1l se déve- loppe surtout á la partie inférieure des zoécies. Aflinités.— Cette espece ressemble étrangement a Membranipo- rella nitida, var. intermedia C. Norman ?, de líle de Madeire. 11 y a presque identité absolue; néanmoins je n'ai pas osé faire leur iden- tification. Notre espéce diftere de celle de Norman: 1. par un plastron plus concave, et beaucoup plus nettement délimité et généralement fusiforme; 2.2 par la présence d'un ectocyste lisse qui la rapproche des Figularia; 3.” par ses avicellaires constam- ment oraux et jamais disséminés. Il faut la rapprocher aussi de Cribrilina spatatula Calvet [36], p. 19, pl. 11, fig. 1-3, des mers antarctiques. Elle en différe par la présence de son plastron fusiforme et par lPabsence de quatre grosses épines orales. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Fam. ASPIDOSTOMIDAE Canmv, 1908. Gen. ASPIDOSTOMA Hixckeus, 1881. Diagnose. Voir: Premiere partie, p. 276. Bibliographie anatomique.— 1886. J. JuLnLien. Mission scientifique du Cap Horn, Bryozoaires, vol. 6. Paris, 8.*, p. 77.—1889. A. Warkrs. Scientific Results of the Voyage of. M. H. $. Challenger. Supplementary Report, vol. 31,p.98, pl. 1, fig. 16-18, pl. 117, fig. 20-21.—1909. Levinsen. Morphological and systematic studies of the Cheilostomatous Bryozoa, Copenhague, 4to, p. 171. Les deux échancrures latérales de l'opésie sont des opésiules pour Levinsen. Pour Waters, elles servent de passage aux muscles operculaires. 1 1909. C. Norman. The Polyzoa of Madeira. Linnean Society's Journal, Zoology, Nola po 288, pl 36) L100 7. 254 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 35. Aspidostoma onychocelliferum, nov. sp. PY on alas Diagnose.—Zoarium encroútant les huítres. —Zoécies distinctes, séparées par un profond sillon. Frontale convexe, oblique vers Popésie, tres granuleuse. Orifice terminale, semilunaire, transverse, a bord inférieur concave. Tubérosités orales peu accentuées. — Avicellaire ectociptal rare, petit, peu saillant, circulaire.—Onycho- cellaire droit, losangigne, élargi a la base, pointu au sommet, avec une opésie ovale subterminale.— Ovicelle inconnue. Zoteio | L2=0,46 -0,64 omésio $ Lo =0,09-0,11 d e e: 050 |la =0,22-0,46 Eo 016018 Observations. —Voici encore une espéce qui montre combien sont intimes les relations de Aspidostoma avec Onychocella. Les onychocellaires sont ici bien réels. J'ai méme cru observer sur certalins d'entre eux les petites perforations qui caractérisent les réticulocellaires. Si cette observation se confirmait sur des spécl- mens mieux conservés il ny aurait plus aucun doute: les Aspidos- tomidées devraient étre rangées dans la famille des Microporidées (ou Opésinlidées) a cóté des Rhazasostoma. Cependant les diffé- rences avec ce dernier genre sont tellement considérables que je considere comme tres incertains et tres hypothétiques les rappro- chements déja faits par Levinsen en 1909. Affinités.—Cette espéce differe de Aspidostoma giganteum Hincks par absence de la callosité frontale. Elle differe aussi de Aspi- dostoma incrustans, du Patagonien par Vabsence des gros pores frontaux et par ses dimensions beaucoup plus petites. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 35. Aspidostoma globiferum, nov. sp. Pleyr ie 1gs Diagnose.—Zoarium grand, irrégulier, encroútant les huítres.— Zoécies distinctes, séparées par un profond sillon, allongées, ellip- tiques. Frontale tres convexe, grenue. Orifice terminal, semilunaire, transverse, avec deux sinuosités latérales peu profondes. Pas de CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 255 tubérosités orales.— Ovicelle globuleuse, tres saillante, s"ouvrant au-dessus de l'opercule.—Avicellaires, petits, elliptiques, la pointe en haut, logés dans de petits espaces interzoéciaux. Lz=0,46 | Lo =0,07 Opésie | lz =0,27-0,46 ES do = 0182016 Zoécie Lz=0,13-0.16 do EA peas lala lz =0,07 Observations.—CUette espece est tres remarquable par ses carac- teres divergents. L'armature orale si caractéristique de Aspidosto- ma giganteum ou de Aspidostoma flammalum n'existe pas ic1. Les tubérosités orales qui existent dans la plupart des especes du genre manquent également. Les affinités avec le genre Gargantua J. Jullien, sont tres remarquables tant par la forme de lP'orifice que par la présence du petit avicellaire intercalé. Seuls les deux den- ticules qui ornent la levre inférieure manquent dans cette espéece. Néanmoins ce nouveau rapprochement tend a établir une fois de plus que c'est dans la famille des Opésiulidées qu'il faudralt ranger ce genre Aspidostoma qui parait ainsi concrétiser á lui tout seul, deux ou trois familles de fossiles crétacés. Localités.—Rocanéen de Rio Negro et de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). BRYOZOAIRES OCHEILOSTOMES ESCHARIENS = AscoPHorA Levinsen, 1909. Fam. MICROPORELLIDAE Hixcks. Gen. HIANTOPORA Mc. GiLLicray, 1904. Frontale percée de micropores irréguliers. Apertura subtrian- gulaire avec un ou plusieurs denticules de chaque cóté. Sur la leyre inférieure du péristome un grand avicellaire sessile. Oligoce- ne-actuel. L'ouverture externe ou péristomice ne correspond pas avec Pouverture interne ou apertura, close par l'opercule. Levinsen (loc. cit., p. 111) s'est completement trompé en clas- sant dans ce genre Tremopora radicifera, et en changeant la diag- nose exacte du genre donnée par Mc Gillivray en 1904. 256 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 37. Hiantopora tripora, nov. sp. Pl. vir, fig. 4. Diagnose.— Petit Zoarium encroútant les huítres.— Zoécies dis- tinctes, séparées par un sillon profond, elliptiques, allongées, trés convexes. Frontale lisse perforée de deux ou de trois micropores disposés en triangle. Apertura terminale, oblique, transverse; anter semilunaire; poster simplement concave. Un avicellaire oral, placé á gauche ou á droite de apertura petit, elliptique. Un autre avi- cellaire trés allongé, placé entre les zoécies.— Ovicelle grande, convexe, globuleuse, lisse, placée sur Vectocyste de la zoécie supé- rieure. Zoceio | T2=088-088 y... jLa=0/09-0,11 ertura El 0,9901 P lis 0 UA Localité.— Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Gen. TREMOGASTERINA, nov. Diagnose. — Frontale perforée par un grande ouverture qui en oceupe presque toute la surface. Type: Tremogasterina problematica Cann. J'ignore absolument le róle physiologique de cette grande per- foration frontale. Dans le genre Lobopora, elle est fermée, au fond, par une lamelle perforée qui peut étre assimilée á un micropore. Ici elle se montre toujours entiéere. 38. Tremogasterina problematica, nov. sp. Pl. vir, fig. 12, 13. Diagnose.— Zovarium encroútant les huítres.— Zoécies distinctes, séparées par un sillon atténué. Frontale occupée par une ouverture plus grande que l'orifice. Apertura grande, terminale, semilunaire ou semielliptique, le plus souvent aussi large que haute.— Avice- llaires intercalés, petits, elliptiques ou fusiformes, ayant une ou- verture rétrécie presque au milieu par deux denticules latéraux.— CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 257 Ovicelle subglobuleuse, peu saillante, s'ouvrant dans l'intérieur de la zoécie. Lz =0,46 (max.) da 019. Apertura | la 000 a Ol Zoécie Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Fam. LEPRALIDAE J. JurLies, 1903. Bibliographie anatomique.—1865. Smrrr. Om Hafs-Bryozoernas ulveckling och fettkroppar. Ofversight Kongl. Vetenskaps-Akademiens Fóorhandlingar, xx1t, p. 7,28, pl. 1, fig. 11, 12, pl. 2, fig. 1, pl. 5, fig. 29-22.—1900. L. Carver. Contribution á l'his- toire naturelle des Bryozoaires ectoproctes marins, Montpellier, 8.%, pl. v1.—1903. S. Harmer. On the morphology of the Cheilostomata The quaterly Journal of. micros- copical Science, Vol. 46, pl. 17. Gen. CIANOTREMELLA, nov. Diagnose.—Zoécies encadrées. Apertura non terminale; anter semicirculaire, poster convexe. Ovicelle interne s'ouvrant par un pore saillant et transverse. Type Cianotremella gigantea Canu. 39. Cianotremella gigantea, nov. sp. Elvas Diagnose.—Zoarium irrégulier, grand, encroútant les huítres.— Zoécies distinctes, séparées par un mince filet saillant, subhexago- nales, peu allongées, larges. Frontale lisse, un peu convexe. Aper- tura antérieure, transverse, subterminale; anter semicirculaire, poster convexe.—Ovicelle cachée dans la partie supérieure de la zoécie, s'ouvrant, par une fente salllante et transverse, au-dessus de apertura. Zosei Lz = 0,46 - 0,55 MET ha =0,11-0,14 A 0 seco. 0 a 0:90 Observations. —La constitution de cette espéece remarquable nous échappe absolument. Aucune espéce vivante ne peut lui étre com- parée et nous ne pourrions faire que des hypothéeses. Si le pore supérieur est bien réellement une ovicelle, il correspondrait alors a celle des Mélicéritidées (ou Cellaridées). 258 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Je classe 1ci cette nouvelle espéce. Elle pourrait aussi bien prendre place dans une autre famille. Localité.— Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Commun. Gen. HIPPORINA VNovrant, 1895. T'orifice ou apertura est étranglée latéralement par deux petites dents ou cardelles. L'anter et le poster sont généralement inégaux. Tertiaire—Actuel. Les cardelles résistent rarement a la fossilisation. 40. Hippoporina Normaniana, nov. sp. Plya Miectos Diagnose.— Zoarium tres petit, encroútant les huítres.—Zoécies distinctes, séparées par un sillon profond, subhexagonales, amin- cies en haut et en bas, presque aussi larges que longues. Frontale convexe, ornée de pores irrégulierement placés. Apertura termi- nale subronde; poster plus petit que l'auter.—Ovicelle inconnue. Zosci Lz = 0,55 ds y ¡ha = 0,09 009) la =0,46-0,50 dd [A 0 Observations. —Il est regrettable que nous ne possedions pas plusieurs colonies de cette belle espece. Je la dédie a mon savant confrere anglais M. Canon Norman qui a déja fait de remarquables travaux sur les Bryozoaires des mers septentrionales. Localité. — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 41. Hippoporina planulata, nov. sp. Pia e LOA Diagnose. —Zoarium encroútant les huítres. — Zoécies distinctes séparées par un sillon, allongées, subhexagonales, tres amincies en haut et en bas. Frontale lisse, peu convexe, presque plane. Apertura terminale, transverse; anter semicirculaire, portant quelques épines, poster plus petit, simplement concave.—Ovicelle CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 259 interne, s'ouvrant extérieurement par une fente transversale placée au-dessus de l'apertura. e y Lz = 0,47 - 0,55 y La =0,07 Zoécie Apertura [lz =0,37-0,46 SO Variations. — La largeur zoéciale est tres irréguliére; elle est parfois plus grande que la longueur. L'apertura est souvent tres petite. J”ai découvert quelques traces d'épines; 1l devait y en avoir au moins quatre. La fente ovicellarienne résulte peut-étre d'une calcification incomplete du coitis. Affinités.—La frontale, presque plane et lisse, différencie nette- ment cette espece de Hippoporina Normani. Localité. — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 42, Hippoporina De Angelisi, nov. sp. 12O ión, ateo (5 Diagnose.—Zoarium encroútant les huitres.—Zoécies dictinctes, séparées par un sillon, elliptiques, un peu allongées, ventrues. Frontale lisse, tres convexe. Apertura terminale, transverse; anter semicirculaire, poster convexe. Avicellaire ectocystal irréguliére- ment placé sur la frontale, saillant, la pointe en haut. — Ovicelle petite, peu apparente, légérement convexe, s'ouvrant dans la zoécle. A Lz= 0,31 - 0,33 | ha = 0,05 - 0,07 Zoécie Apertura |lz = 0,27 -0,37 [la =0,07 - 0,09 Observation. — Je dédie cette espéce á mon savant confrére de Rome, De Angelis, qui nous a fait de belles recherches sur les Polypiers argentins. Localité. — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 43. Hippoporina ? gibbosa nov. sp 1210 ar nia Ye Diagnose. — Zoarium encroútant les huitres.—Zoécies distinctes, séparées par un sillon profond, trés irréguliéres, allongées. Fron- 260 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AI[RES. tale lisse, convexe, gibbeuse, ornée de petites cicatrices et de un ou deux avicellaires ectocystaux irrégulierement placés. Apertura terminale, transverse, entourée d'un bourrelet tres peu saillant.— Ovicelle inconnue. y La = 0,33 -0,40 : y ha = 0,09 Zoécie [lz =0,20-0,27 Apertura ll 0 10d Observations.—Par la nature de sa frontale, par la forme de son orifice, par son organisation générale tres divergente, cette espece ne peut rentrer dans le genre Hippoporina. Mais, pour l'instant je ne vois pas la nécessité d'encombrer la nomenclature d'un nouveau genre basé sur Punique spécimen, d'ailleurs incomplet, du Musée de Buenos Aires. Localité, — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Gen. BALLANTIOSTOMA Marsson, 1887. Apertura oblique. Anter semicirculaire; poster trés convexe, se redressant en mucron. Campanien. Type: Ballantiostoma marsu- pim Marsson. 44. Ballantiostoma fibrosum, nov. sp. PIS VIE Ala. 19/10, Diagnose.—Zoarium discoidal, encroútant le huitres.—Zoécies petites, distinctes, séparées par un sillon profond, elliptiques, peu allongées, ventrues. Frontale tres convexe, fibreuse. Apertura terminale, oblique, subronde; poster généralement convexe. Deux avicellaires oraux.——Ovicelle inconnue. Apertura | MA 0,09 = 0,11 (a =009 Observations. —Cette petite espéce est tres polymorphe. L'aper- tura notamment présente une infinité de variations. Ce manque de constance parait indiquer qw'elle constitue plutót un peristomi- ce qu'une véritable apertura. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 261 Dans les áges géologiques le genre Ballantiostoma a précédé le genre Hippoporina. Quand nous en comprendrons mieux les carac- teres, 1l faudra peut-étre créer une famille nouvelle. Localité. —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Commun. 45. Ballantiostoma parvulum, nov. sp. 1 ia a o (S Diagnose.—Zoarium trés petit, encroútant les huítres. —Zoécies, tres petites, distinctes, séparées par un sillon, allongées, elliptiques. Frontale lisse ou fibreuse, convexe. Apertura terminale, allongée ou subronde; poster droit ou un peu concave.— Ovicelle globuleu- se, peu salllante, non fermée par l'opercule. Lz =0,27 - 0,31 lz =0,16-0,18 | La =0,09 Apertura la =0,09 Zoécie Affinités.—Cette espece differe de Ballantiostoma fibrosa par ses dimensions plus petites, par l'absence d'avicellaires et par l'anter qui est rarement convexe. Localité.—Rocaréen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Assez commun. Gen. HOPLOCHEILINA, nov. Diagnose.—Frontale déprimée. Apertura grande, subtriangu- laire; poster convexe. Un ou deux gros avicellaires oraux, Céno- manien - Maestrichtien. Type: Eschara osculifera Reuss. Comme Ballantiostoma, ce genre fait probablement partie d'une autre famille que celle des Lépralidées. Il faut attendre la décou- verte de quelques especes actuelles pouvant nous instruire sur leur structure. Especes du méme genre: Eschara osculifera Reuss, du Cénomanien allemand, Eschara ichnoidea Hagenow, du Maestrichtien belge, Reptescharellina prolifera Gabk et Horn, du Danien du New Jersey, Lepralia ( Mucronella) Russelli Pergens, du Maestrichtien belge. Ana. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xIv. Mayo 27, 1911. 17 269 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 46. Hoplocheilina spectabilis, nov. sp. Pri alado Diagnose.—Zoarium tres grand encroútant les huitres.—Zoécies distinctes limitées par le péristome oral, allongées tres rétrécies en arriére, arrondies en avant. Frontale lisse, plane, enfoncée, souvent tres réduite en surface. Apertura trés grande, transverse; anter subtriangulaire, poster droit ou convexe, Péristome saillant. -—Ovicelle transverse, globuleux, saillant, s'ouvrant dans la zoécie. —Avicellaires oraux tres gros, ronds, toujours placés a cóté du poster. ¡ Lz =0,46 - 0,55 ba 011 Apert ¿ )lz =0,27 -0,29 Pa 04420 La Zoécie Variations.—Malgré Vaspect général, il y a rarement deux ayice- llaires oraux; le plus souvent il n'y en a qu'un seul. Sur le bord proximal du zoarium les zoécies s'élargissent, de- viennent convexes, la saillie du péristome s'atténue beaucoup, mais le poster reste toujours convexe. Le zoarium s'étale largement et il y ena un au Muséum de Buenos Aires qui mesure plus de 5 centimetres carrés de surface. Affinités.—Cette espéece se rapproche surtout de Eschara osculi- fera Reuss. Elle en difféere par sa frontale relativement plus petite et par la présence d'un seul pore oral au lieu de deux. Localités. —Rocanéen de Rio Negro et de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Assez commun, Fam. SMITTIIDAE J. JuLLien, 1886. Gen. EXOCHELLA J. JuLLiegn, 1888. Pour la diagnose, voir: Preemiere partie, p. 299. Dans ce genre louverture visible n'est pas celle qui est fermée par lopercule: c'est le peristomice. L'apertura, ou orifice vrai, est située un peu plus bas au fond d'une péristomie plus ou moins developpée; pour connaítre sa forme, il faut examiner l'intérieur des zoécies bien conservées; le manque de matériaux ne m'a pas permis de me livyrer á ce travail de dissection extrémement délicat pour les espéces encroútantes. Bibliographie anatomique.—1886. J. JuLLsen. Mission scientifique du Cap Horn Bryozoaires, vol. v1, pl. 9, fig. 2. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 263 41. Exochella mutabilis, nov. sp. Pl. yu, tig. 82 19; Diagnose— Zoarium encroútant les huitres.—Zoécies distinctes séparées par un sillon profond, peu allongées, trés ventrues. Fron- tale trés convexe, ornée de tres fines fibres radiales, entourée de quelques pores origelliens d'autant plus nombreux que Vavicellaire ectocystal est plus petit. Péristomice transverse, oblique; lévre supérieure semicirculaire, ornée d'épines dont les deux premiéres sont les plus grosses; levre inférieure convexe portant une sorte te languette plus ou moins relevée et saillante.—Ovicelle globuleu- se, salllante, s'ouvrant a l'intérieur de la zoécie. dosoio | 12=037-0,48 A 0ec eristomice j | la =0,27-0,36 ip == 0185015 Variations.—C'est une espece remarquable dont les variations sont aussi intéressantes qu'inattendues. Elles sont telles que, primitivement, j'avais cru reconnaítre trois espéces différentes. Dans la forme la plus simple il y a un tres gros avicellaire ecto- cystal dont le talon confine au sillon séparatif et dont la pointe est tournée vers l'orifice (fig. 8). Il protege toujours une ovicelle voisine. Parfois il y a deux plus petits avicellaires symétriques. Dans la plupart des cas, l'avicellaire diminuant de grandeur, il se forme au voisinage du sillon séparatif quelques pores origelliens, dont le nombre n'est jamais supérieur á six. Méme, dans ce cas extréme, lavicellaire reste toujours distinct par ses dimensions un peu plus grandes. La théorie des origelles de J. Jullien n'a jamais été admise. Voici pourtant encore une vérification probante. Elle nous montre la relation indubitable quí existe entre les ponctuations latérales des zoécies et les hétérozoécies. Enfin, les avicellaires disparaissent quand les zoécies voisines ne sont pas ovicellées, ce qui contribue á faire varier beaucoup leur aspect général. Le péristomice, comme c'est la regle, est tres variable; le mucron s'atténue plus ou moins, disparait méme, sans raison appréciable. Affinites.—Cette espece diftere de Mucronella ventricosa Hassal des mers européennes par ses dimensions plus petites, par son mucron moins saillant et surtout par la présence de son avicellaire. 264 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Ce rest pas non plus Exochella Zelanica Levinsen, du Pacifique, qui est ornementée d'épines, de cavités septulaires et d'avicellaires nettement différenciés. Localité.—Rocannéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 48. Exochella elongata nov. sp. Pl ita to: Diagnose.—Zoarium grand, encroútant les huítres.—Zoécies dis- tinctes, séparées par un filet calcaire placé au fond d'un sillon, tres allongées, fusiformes, tres rétrécies en arriére. Frontale lisse, un peu convexe, entourée d'une ligne particuliére de gros pores origelliens dont au moins un est transformé en avicellaire. Péris- tomice oblique, transverse, étranglé latéralement par deux carde- lles solides; languette de la levre inférieure tres saillante, quelque- fois bifide. — Ovicelle grosse, globuleuse, saillante, lisse, s"ouvrant dans la zoécie. ) Lz = 0,40 - 0,46 y Lp = 007 Zoécie / Péristomice [lz =0,27 lip =0/14 Observations.—J'ai mesuré la hanteur du péristomice au-dessus du bord distal de la languette orale. Il y a souvent deux avicellaires et 1ls sont toujours disposés de maniéere a protéger les ovicelles des zoécies latérales adjacentes; quand ces derniéres ne sont pas ovicellées, les avicellaires dispa- raissent. J'ai déja fait la méme observation sur Exochella mutabi- lis. Il serait intéressant de vérifier sur d'autres espéeces s'1l existe une méme relation entre les avicellaires et les ovicelles, Dans tous les cas voici une fonction des avicellaires assez inattendue et notre Exochella elongata nous parait avoir des instincts extréme- ment maternels! Affinités.—Cette espece se rapproche un peu de Exochella longi- rostris J. Jullien. [9], p. 55, pl. 3, fig. 1 a 4, des cótes argentines. Elle en différe par ses zoécies fusiformes et ses ovicelles plus saillantes. Localité. —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 265 Gen. PORELLA Gray, 1848. Avicellaire placé dans la péristomie ou sur la léeyre antérieure de P'orifice. Ovicelle hyperstomiale. Lutécien. Actuel. Type Pore- lla compressa Sowerby. Bibliographie anatomique. — 1900. W. "Warers. Bryozoa from Franz - Josef Land. Linnean Society's Journal Zoology, vol. xxv1Hm, p. 76. 49. Porella Grregoryana, nov. sp. lbs ams (05 7 Diagnose.— Zoarium orbiculaire, encroútant les huítres.—Zoécies trés petites, distinctes, séparées par un sillon profond, allongées, elliptiques. Frontale convexe, lisse. Avicellaire dorsal terminé par une pointe saillante, s'ouvrant perpendiculairement a l'orifice, fréquemment dédoublé. Péristomice enfoncé, oblique, transverse. ——Ovicelle globuleuse, peu saillante, s'ouvrant dans l'intérieur de la zoécie. / Lp = 0,05 -0,07 | Lz = 0,22 - 0,31 Péristomice |lp =0,09-0,11 Zoécie |lz =0,14-0,20 Observations. — C'est surtout sur le bord distal du zoarium que Pon peut observer deux avicellaires oraux sur une méme Zoécie. Je dédie cette espéce á mon savant confrere anglais M. Gregrory qui a fait de si patientes recherches sur les Bryozoaires crétacés. Localité. —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 50. Porella Levinseni, nov. sp. 2 26te al0), dilo Diagnose.— Zoarium subdiscoidal, encroútant les huitres.—Zoé- cies distinctes, séparées par un sillon profond, elliptiques, ven- trues. Frontale lisse, trés convexe, portant un avicellaire saccifor- me qui s'ouvre obliquement au-dessus de l'orifice. Péristomice, terminal, petit, oblique, transverse.— Ovicelle saillante, globulense, transverse, ponctuée, non fermée par l'opercule. Lz = 0,36 - 0,37 y Lp = 0,03 - 0,05 Zoécie | Péristomice | pl =0,09-0,13 [lz =0,18-0,20 266 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Variations. — Quand Vavicellaire frontal est brisé, il reste une longue cicatrice concave, triangulaire, occupant une trés grande partie de la surface zoéciale. Entier, il se dédouble quelquefois. L'ancestrule est une tres petite zoécie dépourvue d'avicellaire. Le bourgeonnement linéaire parait indiquer une grand septule distale. Je dédie cette charmante espéce á4 mon savant ami, le Dr. Le- vinsen, de Copenhague, qui a fait de si beaux travaux sur les Bryozoaires actuels etá qui je suis redevable de beaucoup de matériaux de comparailson. Localité. — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Gen. LAGENIPORA Hixcks, 1877. Pour la diagnose, voir. Premiere partie, p. 300, 51. Lagenipora minuscula, nov. sp. IA ad 7 Diagnose. —Zoarium orbiculaire, encroútant les huítres.—Zoécies trés petites, elliptiques. Frontale trés convexe, grenue. Péristo- mice orbienlaire, saillant; peristomie peu profonde, évasée, 1rré- guliére. Deux tres petits avicellaires sur le péristome.—Ovicelle globuleuse, grenue, s*ouvrant dans la zoécie. y Lz —= 0,29 Lp = 0,05 Péristomic Zoécle e la =0,13 [Ip =0,05 Localité. — Recanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). BRYOZOAIRES CYCLOSTOMES Aa. PARALLELATA Waters, 1887. Fam. DIASTOPORIDAE Percaens, 1889. Gen. STOMATOPORA BkronnN, 1825. Zoarium rampant, Zoécies disposées en lignes allongées sim- ples. Jurassique.—Actuel. Type: Stomatopora dichotoma Lamon- roux, 1821. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 9267 Suivant la classification de Pergens, j'ai réuni dans le méme genre les especes uni et multisériales lors de la publication de la Premiere partie de la présente Iconographie. Depuis, Gregory a rétabli les deux genres anciens de Stomatopora et de Proboscina. Si cette derniére classification n'est pas tres naturelle, du moins elle est assez commode dans la pratique. Je ne demande pas mieux que de m'y conformer. Gen. PROBOSCINA Aunouln, 1826. Zoarium rampant. Zoécies disposées en lignes allongées, multi- sériées. Bourgeonnement terminal. Jurassique. — Actuel. Type: Proboscina boryi Audouin. 52 Proboscina striata, nov. sp. 12, 5) E. E) Ela Diagnose. —Zoarium grand, tres rameux, bifurqué dans tous les sens, comprenant 1, 2, 3 zoécies sur les rameaux.—Zoécies trés allongées, entierement visibles, séparées par un sillon profond, nullement relevées á leur extrémité. Péristome petit, tres salllant, oblique. ¡ Diametre = 0,11 Longueur = 0,46 - 0,55 Zoécie Observations.—Les séries sont linéaires au voisinage de P'ances- trule. Plus loin elles sont claviformes et striées transversalement; de plus les sillons séparatifs tres visibles leur donne un aspect strié longitudinalement qui s'observe facilement a la simple loupe. Affinités.—Cette espéce se distingue du Proboscina fasciculata Reuss, du Crétacé européen, par moins de zoécies aux rameaux qui sont le plus souvent unisériés et par les rides transversales beau- coup plus accentuées. Localité. —Rocancen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 53. Proboscina eburnea D'OrBrcNY, 1839. Pito: 1839. Alecto eburnea D'OrsIGNY. [8], Am. mér., p. 20 pl. 1x, fig. 14-16. 268 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Observations.—Nous ne possédons qu'un zoarium de cette char- mante espéce. Il est long d'environ un centimetre et demi. Les petits tubes tres saillants sont relevés a 45 degrés. Nous avons relevé les mesures suivantes. Zoe ¡ Diametre = 0,11 oécie | Longueur = 0,27 - 0,37 Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Habitat. —Iles Malouines, á de grandes profondeurs (d'Orb.). 54. Proboscina diebotoma D'OrBIcGNY, 1839 ?, PL rx, :fig-04. 1839. Criserpia dichotoma b'OresiGnY. [8], Amér. mér. p. 19, pl. 1x, fig. Y - 13. Observations.--Nous ne possédons qu'un seul zoarium de cette espéce; il est tres conforme aux figures données par d'Orbigny comme il est facile de le voir sur la nótre. Les Zoécies sont un peu relevées á leur extremité distale. Nous avons observé les di- mensions suivantes qui, prises au voisinage de lancestrule, ne peuvent étre qu'approximatives. ¡ Diamétre =0,09-0,11 Zoécie : ve | Longueur = 0,55 (en moyenne) Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Habitat.—Iles Malouines. Cap. Horn (d'Orb.). Gen. DIASTOPORA Lamourous, 1821. Zoarium rampant en forme de disque ou de plaques irréguliere- ment contournées. Zoécies en lignées irrégulierement alternantes, plus ou moins libres á leur partie distale. Ovicelles formant des 1 Qutre ces diverses espéces de Proboscina j'ai encore cru reconnaítre sur des huítres de Roca: Proboscina fasciculata Reuss 1846 el Proboscina crassa Rómer 1840. Mais ces spécimens sont trop mal conservés pour étre figurés et identifiés avec certitude. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 269 parties vésiculeuses, a un ou plusieurs orifices, a la surface de la colonie. Gregory a repris lancien nom de Berenicea Lamourous pour ces formes encroútantes. 55. Diastopora (Berenicea) papillosa Reuss, 1846. 12912 sima, dl Eo 10. 1846. Diastopora papillosa. Reuss. Verst. bóhn. Kr., p. 65, pl. xv, fig. 44, 45. 1854. Diastopora oceanica D'OrBIGNY. [40], Pal. Fr., Terrains crétacés, t. v, p. 866, pl. 639, fig. 6-7. 1854. Diastopora echinata D'OrBIGNY. [40], Pal. Fr., p. 868, pl. 641, fig. 12. 1854. Reptomultisparsa congesta D'OrBIGNY. [40], Pal. Fr. p. Sí8S, pl. 640, fig. 1-6. 18589. Diastopora papillosa PrerGENs. [43], Révision, p. 334, pl. 11, fig. 6 et 9, pl. 12, fig. 1. 1599. Berenicea papillosa GrEGorY. [41], Catalogue, p. Sl, pl. v, fig. 6-9. Bibliographie. Observations.—Les zoécies sont caractérisées par leur bordure tres légerement saillante, leur rétrécissement inférieur, leur ouver- ture en bec de flute, et leur denticule distal. Le zoarium s'étale largement sur les huítres. Fréquemment 1l y a plusieurs colonies confluentes ou issues les unes des autres. L'ovicelle 1'est pas toujours globuleuse, comme sur nos figures; elle est souvent beaucoup plus volumineuse encore et figure une ellipse tres allongée. Zoóci | Diametre =0,12-0, 14 oécie 5 | Longueur = 0,55 Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Pas rare. Distribution géologique.—CÉNOMANIEN de Boheme (Rss) et de France (d'Orb.) TuronieN de France (d'Orb.) et d'Angleterre (Greg.). Contacien de France (d'Orb.) et d'Angleterre (Greg.). San- TONIEN de France (d*Orb.), du Brunswick (Rss.) et d'Angleterre (Greg.). CAMPANIEN de France (d'Orb.) MArESTRICHTIEN de France (d'Orb.) et de Belgique (Staring). DANIEN de Faxe (Hag.). TO MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 56. Diastopora (Berenicea) suborbicularis Hixcks, 1880. Pl. x, fig. 12. 1904. Diastopora suborbicularis F. Caxv. [7], Bryoz. Patago- nien, p. 19, pl. v, fig. 57. Bibliographie. 1908. Diastopora suborbicularis F. Canu. Iconographie des Bryozoaires fossiles de Argentine. Premiére partie. Anales del Museo Nacional de Buenos Aires; Tome xvi (Ser. 3.*, $. Xx), Pp.908, pl x, tig Lo. 1909. Diastopora suborbicularis Y. Canv. [38], Tert. Paris, Tartase: 2 p 110 pla e ao. Observations.—J'ai tenu á photographier ici les stries concen- triques qui ornent souvent cette espéce au voisinage de l'ances- trule, ce que je n'avais pu faire en 1908. J'ai relevé les dimensions micrométriques suivantes; elles sont un peu plus grandes que celles données en 1909. Largeur zoéciale 0,11 -012. Longueur zoéciale = 0,37 - 0,45. Diametre de Porifice = 0,05. Cette espece n'est pas á confondre avec Berenicea americana Bassler et Ulrich [44], p. 315, pl. xx, fig. 7, du crétacé supérieur du New Jersey, dont les dimensions sont beaucoup plus grandes ?. Localité. —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Distribution géologique. — Lutécien des environs de Paris (Camu). PRIABONIEN du Vicentin (Waters). BURDIGALIEN du Gard (Coll. Canu). HeLvérieN du Gard et de lP'Héranlt (Coll. Camu). "TorTONIEN d Italie (Seguenza). SAHÉLIEN d'Algérie (Coll. Canu). PLAISANCIEN d'Ttalie (Seguenza, Manzoni, Neviani) et d'Angle- terre (Busk). SiciLIEN d'Ttalie (Seguenza, Neviani). QUATER- NAIRE d'Italie (Seguenza, Nevilani). TERTIAIRE d'Australie et de Nouvelle Zélande (Waters). PATAGONIEN de l' Argentine (C. Ameghino, A, Tournouer). Habitat. —Atlantique oriental et septentrional, jusqu'a 180 me- tres. Méditerranée, de 4 á 12 metres. Pacifique en Australie. 1 Les dimensions de Diastopora americana n'ont pas encore été données. Sur dVexcellents spécimens j'ai relevé les suivantes. Largeur zoéciale = 0,13 — 0,15; péristome = 0,11; longueur zoéciale = 0,46. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 29271 57. Diastopora (Berenicea) littoralis D'Orsia6nY, 1851. ar Male eco 1851. Diastopora littoralis D'OrBIGNY. [40] Pal. fr., p. S67, pl. 640, fig. 7-8. 1886. Diastopora littoralis PeErRGENS Er MEUNIER. Bryozoalres garummens de Faxe. Anmales Soc. mac. Belg. vol. xxt, Mém. p. 201. 1889. Diastopora littoralis PErRGENs, [43], Révision, p. 337. Observations.— Cette jolie espece se présente sous forme de disques irréguliers et excentriques dont la lame germinale est tres large. L'ovicelle est une grosse boursouflure elliptique á ceciostome orbiculaire. Les tubes sont peu relevés antérieurement; leur orifice est en bec de flute, c'est -á - dire, horizontal et elliptique. Pergens a remarqué un grand mélange dans les tubes de la Collection d'Orbigny relatifs á cette espece. Il ne faut donc retenir que Meudon, localité du type de la figure dessinée dans la Paléon- tologie francalse. sl Larseur, =013=0:14 Largeur =0,05-0,07 Zoécie Orifice Longueur = 0,27 -0,37 Longueur = 0,07 - 0,09 Localité —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Distribution géologique. —CAMPANIEN du Bassin de Paris (d'Orb.). DANIEN de Faxe (Pergens). Fam. TUBULIPORIDAE Busk. 1859. Bibliographie anatomique.—1898. S. Earmer. On the Development of Tubu- lipora. Quat. Journal Microscopical Science, vol. 41, N. S. p. 73.—1865. Smrrr Om Hafs - Bryozoernas utveckling och fettk roppar. Ofversigt Kongl. Vetenskaps - Akademiens Fórhandlingar, xxt1, p. 20, pl. 4, fig. 9 - 14. Gen. TUBULIPORA S. Harmer, 1898. «Zoarium avec une lamelle basale distincte, encroútant ou érlgé, commencant comme une colonie flabelliforme ou pyriforme qui peut devenir lobé par la division de la membrane terminale. Lobes courts et adhérents, oulongset divisés dichotomiquement,quelque- fois érigés. AA MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Zoécies avec une partie terminale libre et cylindrique; ou grou- pées en séries transverses et obliques oú elles restent distinctes. Les séries sont arrangées alternativement sur les cótés opposés de la ligne axiale du lobe, mais l'arrangement transverse devient géné- ralement radial dans la partie distale des lobes fertiles. Ovicelle: une zoécie élargie qui s'étale entre les intervalles des séries paralle- les ou radiales.» En résumé Tubulipora est caractérisé par des zoécies libres prés de Vancestrule (comme Diastopora) et par des zoécies groupées en faisceanux pres des marges zoariales (comme Idmonea). La définition de Harmer englobe donc les espéces encroútantes: et linéaires a séries transverses; Tubigerina, et linéaires a séries alternes: Reptotubigera d'Orb., et flabelliformes á séries radiales incompletes: Phalangella Gray. Dans la terminologie de d'Orbigny, qui peut étre conservée chaque faisceau de zoécies est une lignée. Celle-c1 est monosériée ou bisériée selon qu'elle contient une ou deux rangées de zoécies aux lignées. Dans le méme famille il existe encore: 1.2 un genre Liripora Me Gillivray décrit dans la Premiere partie de cette Iconographie, p. 310. 2. un genre Semitubigera d'Orbigny, que nous avons étudié en 1908 dans les Annales de Paléontolologie [38, p. 139]. Gregory classe les Tubuliporidées de Busk dans sa famille des Idmoniidées. Les uns et les autres 1'ont pourtant pas les mémes ovicelles. Subgen. TUBIGERINA Canv, 1910. Zoarium linéaire. Lignées monosériées et transverses. 55. Tubigerina clavata, nov. sp. Pl dis 0,11: Diagnose.— Zoarium bifurqué, encroútant les huítres, de 4 mm. de longueur. Rameaux claviformes on irréguliers, trés épais. Lame germinale tres développée et a Vextrémité des rameaux seulement. —£oécies groupées en lignées saillantes, monosériales, transversa- les, entierement visibles. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 273 Observations. —Cette espece est trés jolie mais elle est trés irré- guliére. L'extrémité des rameaux est remarquable par son épais- seur et par l'abondance des perforations tubulaires. Les rameaux bifurquent juste a angle droitavec la partie zoariale qui porte les zoécies isolées. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Subgen. PHALANGELLA Gray, 1848. Zoarium flabellé, ou subdiscoidal et excentrique. Lignées mono- sériées et irrégulieres. Type: Tubipora flabellaris Fabricius, 1780. 59. Phalangella Romeroi, nov. sp. Ulsa tas See Diagnose.—Zoarium flabellé de 2 a 4 millimétres de largeur encroútant les huítres. Zoécies marginales groupées en lignées monosériales, irréguliéres, radiales, peu saillantes, tres serrées. Je dédie cette espéce au colonel Romero a quí le Muséum de Buenos Aires est redevable de la belle collection de Bryozoaires etudiée dans la présente Iconographie. Localités. —Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Les spécimens figurés de Rio Negro appartiennent peut-étre á une autre espece; ils sont trop insuffisants ettrop petits pour servir de types á une espece distincte. Subgen. REPTOTUBIGERA D'OrbrGNY, 1852. Zoarium linéaire. Zoécies groupées en lignées monosériales alternes de chaque cóté de l'axe zoarial. Type: Reptotubigera ra- mosa d'Orbigny 1853. 60. Reptotubigera compacta, nov. sp. Elo o: Diagnose.—Zoarium linéaire, plat, de 3 mm, 5 de largeur, encroú- tant les huítres.—Zoécies, petites, groupées en lignées monosériales = ITA MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. peu saillantes, serrées, alternes de chaque cóté de Vaxe zoarial. Cinq ou six zoécies par lignée. Orifice transverse. Zoóci | Largeur =.0:05 Pb | Ecartement = 0,03 Observations.—L'écartement, qui n'est pas la longueur zoéciale, est compté du bord distal d'une lignée au bord proximal de la lignée supérieure. La tres faible élévation des lignées différencie nettement celle espece de Reptotubigera scalaris. Localités.— Rocanéen de Río Negro et de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 61. Reptotubigera spathulata, nov. sp. ELEATAnSO: Diagnose.—Zoarium linéaire, bifurqué, a rameaux subrectangu- laires ou spathulés et mesurant 5 millimétres de longueur et 1 mm, 5 de largeur.—Zoécies disposées au nombre de 4 dans des lignées transverses et alternes et peu saillantes. Orifice transverse. _ , . | Largeur = 0,14 Zoécie / | Ecartement = 0,24 Observations.— La créte zoariale médiane est peu saillante. Tous les rameaux sont entourés par la lame germinale quí est partout visible. Ills sont coupés carrément a leur extrémité, ce qui est tres rare dans les Oyclostomes. La largeur des tubes différencie nettement cette espéce des. autres spécimens que nous décrivons ici. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 62. Reptotubigera scalaris nov. sp. PISE: Diagnose.—Zoarium linéaire, bifurqué a lorigine, plat encroú- tant les huítres. Rameaux arrondis au sommet sans lamelle germi- nale sur les cótés.—Zoécies groupées par lignées transverses, et. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 275 alternes de chaque cóté de Paxe zoarial, tres saillantes, rapprochées.. Sept a huit zoécies par lignée. Orifice transverse. a | Largeur = 008 Zoécle | Ecartement= 0,13 Affinités.—Cette espéce est tres voisine de Reptotubigera com- pacta. Elle ne s'en distingue guere que par la saillie plus grande des lignées. Localité. — Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Fam. IDMONIITDAE PerrGeEns, 1889. Gen. IDMONEA Lamourous, 1821. Pour la diagnose, voir: Premiére partie, pag. 311. 63. Idmonea carinata. Rómer 1840, 12, 5:37 ye ter O. 1540. Idmonea carinata Rómer. Verst, nordd. Kr., p. 21 pl. v, fig. 20. 15351. Idmonea sulcata HaGeENow. Bry. Maastr. Kr., p. 32, pl. 11, fig. 12. 1853. ldmonea cytherea D'OrbienY [40], Bryoz. crét., p. 146, pl. 7150, fig. 11-15. 15887. Idmonea striolata MaArsson, Bryoz. Riúgen. Pal. Abh. vol. Iv, p. 28, pl. 11, fig. 9. 1889. Retecava carinata GrrEGORY [41], Cret. Bryoz., p. 197, fig. 17. Observations.—Je v'ai pu disposer que de Punique spécimen figuré; il est tres ecroúté dans la gangue etsa face dorsale est invi- sible. Ma détermination reste donc un peu douteuse. Les dimen- sions micrométriques sont cependant tres voisines de celles don- nées par Gregory. Largeur zoariale =0,92. Diametre zoécial. = 0,18. Ecartement des séries =0,29-0,31. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Distribution géologique.—CowxtacieEN de France (d'Orb.). SAN- TONIEN de France (d'Orb.) et d' Angleterre (Greg.). CAMPANIEN de Rúgen (Mars.). MAESTRICHTIEN de Belgique (Hg.). 276 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Fam. THEONOIDAE Busk. Gen. ACTINOPORA D'OrBr6GxY, 1853. Zoécies disposées en lignées radiales mono ou plurisériécs. Zoarium discoide. Crétacé - Actuel. Type: Actinopora stellata Koch et Bunker, 1837. 64, Actinopora incrassata, nov. sp. Plisor tlisc0o: Diagnose. - Zoarium encroútant de deux millimétres de diamétre, tres épais encroútant les huítres. Lignées de 2 rangées de Zoécies, tres saillantes, droites épaisses, au nombre de 14 ou 16. Lamelle germinale tout autour du zoarium mais tres étroite. Affinités.——Par sa grande épaisseur, cette espece se distingue tres facilement de Actinopora Robertsoniana. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). 65. Actinopora Robertsoniana, nov. sp. El X1L dio. Ss Diagnose. — Zoarium orbiculaire, excentrique, plus épais sur les bords, encroútant les huítres, de 2,mm5 de diameétre.—Lignées salllantes, au nombre de 18, composées, á la circonférence, de 3 rangées de zoécies, Orifice en bec de flute avec une pointe distale. Lame germinale large. Affinités.—Les lignées, pres de l'lancestrule sont monosériées, mais en s'approchant de la circonférence, elles sont plus saillantes, plus larges, et contiennent 2 4 3 rangées de zoécies. Toutes les lignées ne s'irradient pas du centre. Entre les lignées principales il y en a de beaucoup plus courtes qui commencent au voisinage de la circonférence. Je dédie cette charmante espece a mon savant collégue de San Francisco, Miss Alice Robertson qui nous a fait connaitre les Bryozoaires du Pacifique. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 9277 66. Actinopora complanata Róner, 1840. AL sam ts (> e 1840. Defrancia complanata Rómer. Versteinerungen des nord- deutschen Kreidegebirges, p. 19, pl. v, fig. 19. 1909. Actinopora complanata Gregory. [41], Catalogue Brit. Mus., Vol. 11, p. 11, pl. 1, fig. 4-6. (Non synonymie). Observations.—Le diameétre zoarial est de 3 millimétres et demi. Les lignées unisériales sont tres nombreuses el mesurent environ 0,08 d'épaisseur; elles sont peu saillantes. Gregory a identifié le Radiotubigera organisans d'Orbigny [40], p. 157, pl. 646, fig. 9-13, avec cette espece. Il me semble que les zoécies soient plus grandes. Je Pai donc rayée provisoirement de sa synonymle, car ses identifications ont été faites sur les figures et non de spécimen a spécimen. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). Distribution géologique.—CONIACIEN et SANTONIEN de France et d'Angleterre (Greg.). CAMPANIEN de France (Greg.) et de Suede (Henning). SÉNONIEN d'Allemagne (Rómer). 67. Aectinopora striata, nov. sp. EI eds Diagnose.—Zoarium elliptique, tres excentrique, peu épalis, de 3,mm5 de diameétre, encroútant les huitres.—Lignées peu saillantes, éecartées, monosériales, minces, composées de zoécies tres couchees, Orifice en bec de flute. Lame germinale large. Espaces interli- enaires ridés concentriquement. Affinités.—Cette espece se distingue de Actinopora complanata Rómer, composée aussi de lignées radiales monosériées, par l'écar- tement de ces dernieres et par les rides concentriques des espaces interlignaires. Localité.—Rocanéen de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). AxnaL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xIv. Mayo 31, 1911. 15 278 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. hb, RecranGuLaTA Waters, 1887. Fam. GAL.ELDABE J. JuLLieN, 1888. Voir: Premiere purtie, page 318. Bibliographie anatomique.—1888. W. Warers. On the Ovicells of some Liche- noporea. Linnean Society Journal. Zool., Vol. xx, pp. 280-285, pl. 15.—18%6.— S. Harmer, On the Development of Lichenopora verrucaria, Quaterly Journal Microscopical Science, vol. 39, N. S., pp. 71 - 144, pls. 7-10. Gen. REPTOCAVEA D'OrBrIGNY, 1852. Zoarium encroútant, plus ou moins orbiculaire. Zoécies éparses entre lesquelles sont des cancellis. Accroissement périphérique. Néocomien—Actuel. Type: Reptocavea rugosa d'Orbigny. 68. Reptocavea discoidea, nov. sp. A a nalle pl Diagnose.—Zoarium irrégulierement orbiculaire, encroútant les huítres.— Zoécies salllantes, conchées, disposées en quinconce, a pointe distale tres ajgué. Orifice en bec de flute. Cancellis petits, nombreux, polygonaux, visibles surtout á la périphérie, tres rares au centre. Localité.— Rocanéen de Roca (Coll, Coronel Antonio Romero). 69. Reptocavea? explanata, nov. sp. Plox, dis. 9/a Lo: Diagnose.—Zoarium tres étalé, encroútant les huítres, trés irré- gulier, toujours unilamellaire. Zoécies indistinctes; péristome saillant, oblique. Orifice surborbiculaire. Cancellis polygonaux irrégulierement disséminés. Variations.-—Le péristome saillant et la visiere disparaissent par fossilisation la plupart du temps; alors lVaspect est celui d'un Heteropora. Le mucron distal est plus arrondi que dans Reptocavea discoidea, autant qu'il est possible d'en juger sur des spécimens aussi mal conservés. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 9279 En réalité je ne sais pas oú ranger cette espece, car les auteurs ne sont pas du tout d'accord. Dans le crétacé francais 1l existe des formes analogues tres nombreuses, tres belles, souvent trés bien conservécs mais quí n'ont pas encore de place fixe dans la nomen- clature. Dans la classification de d'Orbigny les formes usées non salllantes sont des Semicrescis et les autres des Reptocavea si la colonie est orbiculaire. Dans celle de Pergens, ce sont des Ditaxia. Hagenow. Enfin pour Gregory ce sont des Multicrescis d'Orbigny. Pour cer colonies irrégulieres il nous faudrait créer un genre spécial. Mais je préfere attendre des études plus sérieuses condui- tes avec la précision des procédés modernes. Et comme la forme zoarlale est peu importante je les classe provisoirement dans le genre Reptocavea. Localités. —Rocanéen de Rio Negro et de Roca (Coll. Coronel Antonio Romero). REPARTITION DES ESPECES PAR LOCALITES 1. Membranipora arborea Canu. 2, Membranipora Langana Oanu. 3. Membranipora abortiva Canu. 4. Membranipora claudata Canu. 5. Membranipora capillimar- go Canu. 6. Membranipora Watersiana Canu. 7. Membranipora Okaiana Can. . Membranipora lineata Linné. . Membranipora Calveti Canu. . Membranipora Nordgaar- diana Canu. . Membranipora minuscula Canu. . Membranipora impressata Canu. . Ramphonotus Bassleri Canu. Y. Pyriporella Ameghinoi Canu. . Pyriporella confluens Reuss. . Pyriporella Filliozati Cana. 2. Ogivalia indistincta Canu. Roca. 27. Euritina lata Canu. 28. Euritina elongata Canu. 29. Euritina intermedia Cana, 31. Coscinopleura Brydonei Can. 32. Micropora convexa Canu. 34. Cribrilina insignis Zanu. 35. Aspidostoma onychocelli- ferum Canu. 36. Aspidostoma globiferum Cana. 31. Hiantopora tripora Can. 338. Tremogasterina problema- tica Canu. 39. Cianotremella gigantea Canu. 40. Hippoporina Normaniana Canu. 41. Hippoporima planula ta Oanu. 42. Hippoporina De Angelisi Canu. 43. Hippoporina gibbosa Can. 44. Ballantiostoma fibrosa Canu. 45. Ballantiostoma parvula Canu. 46. Hoplocheilina spectabilis Cana. 47. Exochella mutabilis Canu. 48. Exochella elongata Canu. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 281 . Porella Gregoryana Camu. Porella Levinseni Canu. . Lagenipora minuscula Canu. . Proboscina striata Canu. . Proboscina eburnea d'Or- bigny. Proboscina dichotoma d'Orbigny. . Diastopora (Berenicea) pa- pillosa Reuss. . Diastopora (Berenicea) su- borbicularis Hincks. . Diastopora (Berenicea) lit- toralis d'Orbigny. Tubegerina clavata Canu. . Phalangella Romeroi Cana. 60. Reptotubigera compacta Can. 61. Reptotubigera spathulata Oanu. 62. Reptotabigera scalaris Canu. 63. Idmonea carinata Rómer. 64. Actinopora incrassata Can. 65. Actinopora Robertsoniana Canu. 66. Actinopora complanata Rimer. 67. Actinopora striata Canu. 68. Reptocaveadiscoidea Canu 69. Reptocavea explanata Canu. Río Negro. Membranipora arborea Canu. Membranipora Langana Canu. Membranipora Cummingsi Canu. . Membranipora Maplesto- nel Canu. . Membranipora trimorpha Canu. Pyriporella confluens Reuss. Ogivalia brevis Canu. . Ogivalia Iheringsiana Canu. 22. . Ogivalia galeata Cann. Ogivalia Hennigiana Cana, Amphiblestrum Harmeri Canu. inférieur á celui de Roca. 26. Amphiblestrum subpapi- llatum Canu. 30. Coscinopleura planulata Canu. 33. Membraniporella capitata Canu. 36. Aspidostoma globiferum Canu. 46. Hoplocheilina spectabilis Canu. 59. Phalangella Romeroi Lana. 60. Reptotubigera compacta Canu. 69. Reptocavea explanata Canv. Les fossiles de Río Negro paraissent appartenir á un niveau INDEX ALPHABÉTIQUE Page : A Abboti (Escharipora)..........-»- . 251 Abortiva (Membranipora)... 221,236 Abortiva (Membranipora)......... 276 ACTINOPORA ((3enre).............- 276 Ameghinoi (Pyriporella). 235, 237, 388 Americana (Diastopora).......... 270 AMPHIBLESTRUM (Genre).......... 249 Arborea (Mernbranipora)......... 219 ASPIDOSTOMA (Genre)............. 233 B BALLANTIOSTOMA (Genre).......... 260 Bassleri (Rhamphonotus)........- 233 'BDERENICEA (GODre):= ac meo maraca 269 bBimarginata (Reptoflustrina)...... 225 Bory(Broboscina) ca deter 1267 Brevis (Opivalla) m3... 239, 240 Brevissima (Micropora)..... .... 250 Brydonei (Coscinopleura) ... 218, 249 C Calveti (Membranipora).......... 228 Canui (Rosseliana). .... ......<.. 239 Capillimargo (Membranipora).... 223 Capitata (Membraniporella)...... 251 Carimata (LAmonea).... comia 215 Cenomana (Reptoflustrella)........ 251 CIANOTREMELLA (Genre)........... 2537 Claudata (Membranipora)........ 222 Clayata (Tubegerina)............. 272 Compacta (Reptotubigera)... 273, 275 Complanata (Actinopora)......... 271 Compressa (Porella). us ceso ó....- 265 Confluens (Escharina)....... 234, 236 Confluens (Pyriporella)...... 236, 238 Confluens (Pyripora)........00.-. 236 Confluens (Vibracella)....... 231, 235 Congesta (Reptomultisparsa)....... 269 Convexa (Micropora)............. 251) CosCINOPLEURA (Grenre)............ 245 Crassa ME yrTIpora).. trar Solas 231 Grassa (METODOSCIDa): diseno 258 Cummingsi (Membranipora)...... 225 Cytherea (Idmonea).............. 275 D De Angelisi (Hippoporina)....... 259 Diastopora (Genre).......0.:2.... 258 Dichotoma (Proboscina)......... 258 Dichotoma Stomatopora.......... 265 Diguata (Eschana lb bossa 248 Discoidea (Reptocavea) ...... PO Distans (Escharipora)............. 251 | | | Page E Eburnea (Alecio)....<. 30 o 215 10 MT Oceanica (Diastopora)........o..o..> 269 | TRrEMOGASTERINA (Grenre).........-. 256 (ETA Gear) osorno ae 239 | Trifolium(Membranipora) ... 245, 246 Okaiana (Membranipora)......... 221 | Trimorpha (Membranipora)...... 2830 Onychocelliferam (Aspidostoma). 251 | Tripora (Hiantopora).......... -. 2096 Onychocelloides (Membranipora). 223 | TUBIGERIiNA (Genre)............. > e Organisans (Radiotubigera)...... IA RL UBULIPORA (Genre). ono 271 Osculifera (Eschara).......... 261, 202 | Otal (Flustrelaria as: 222 V P Ventricosa (Mucronella)........... 263 Papillatum (Amphiblestrum)..... 244 | w Papillosa (Diastopora)............ 265 Parvulum (Ballantiostoma)....... 261 | Watersiana (Membranipora)...... 22: Pedunculata (Membranipora)..... 231 Welsh a ti 947 BEATANGEDLA (Genre). doo 213 Pl.nulata e ei 248, 219 7L Planulata pe ORO A ZO BOREELA (Gente). tad as 255 | Zelanica (Exochella)......... cos. 264 EXPLICATION DES PLANCHES PLANCHE L. 143. Membranipora Watersiana Canu. Roca. Page 223. 1, zoécies closes, zoécies régénérées, ovicelles; 2, plusieurs zoécies sont régénérées; 3, zoécies disposées autour de l'ancestrule. 4,5. Membranipora claudata Canu. Roca. Page 222, 4, zoécies closes; 5, une toute petite zoécie est d'aspect onychocellaire. 6. Membranipora capulimargo Canu. Roca. Page 223. 74 13. Membranipora arborea Canu. Rio Negro. Page 219. 7, cadre mince; 8, grossi 10 fois; 9, restauration zoariale, grandeur na- turelle; 10, 1/, fragments isolés, grandeur naturelle; 12, cadre épais; 13, zoécies plus petites. Toutes les figures sont grossies environ 23 fois. Tous les «Types» sont au Musée National d'Histoire Naturelle de Buenos Aires. PLANCHE II. 143. Membranipora abortiva Canu. Roca. Page 221. 1, cadre granulé; 2, groupe d'hétérozoécies (zoéciules avortées) trés grossies; 3, ovicelles, cadre lisse. 4. Membranipora lineata Linné. Roca. Page 225. Les zoécies sont disposées autour de lPancestrule. 5 4á 8. Membranipora Langana Canu. Río Negro. Page 220. 5, dans la gangue, grossi 5 fois; 6, grossi 4 fois, Roca; 7, grossi 23 fois; S, le méme que 5 grossi 23 fois. 9. Membranipora Cummingsi Canu. Río Negro. Page 225. 10. Membranipora Okaiana Canu. Roca. Page 224. 11413. Membranipora Maplestonei Canu. Río Negro. Page 227. Toutes les figures sont grossies environ 23 fois, Tous les «Types» sont au Muséum d'*Histoire Naturelle de Buenos Aires. NAO lO; dla 12. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 285 PLANCHE III. Membranipora impressata Canu. Roca. Page 232. 1, zoécies normales; 2, zoécies marginales cryptocystées; 3, zoécies normales; 4, zoécies cryptocystées prises sur le méme zoarium que 2; 5, zoécies irréguliéres onychocellaires, une zoécie est régénérée. . Membranipora Calveti Canu. Roca. Page 228, 6, zoécies étroites rectangulaires; 7, avicellaires saillants, normaux; 8, zoécies hexagonales larges, striées; 9, zoécies elliptiques, cadre lisse. Membranipora Nordgardiana Canu. Roca. Page 229, Pyriporella Filliozati Canu. Roca. Page 237. Von BL ty, a 6,1. Membranipora sp. Roca. Page. Toutes les figures non cotées sont grossies environ 23 fois. Tous les «Types» sont au Muséum d Histoire Naturelle de Buenos Aires. aro: 0 8, 9. 10 11. 12, PLANCHE IV. Membranipora trimorpha Cayu. Río Negro. Page 230, 1, zoécies normales armées (2 forme); 2, 3, 4, zoécies normales inermes (1.e forme); 5, zoécies cryptocystées marginales (3.e forme). Toutes ces figures sont prises sur le méme zoarium. Pyriporella Filliozati Canu. Roca. Page 237. 7, grossi 39 fois. Voir Pl. 111, fig. 11. Pyriporella Ameghinoi Canu. Roca. Page 235. S, ovicelles; 9, zoécies entourant l'ancestrule. Pyriporella confluens Reuss. Page 236. 10, Río Negro; 11, Roca. Membranipora minuscula Camu. Roca. Page 229. Toutes les figures sont grossies environ 23 fois. Tous les «Types» sont au Muséum d Histoire Naturelle de Buenos Aires, (8) DM ADO PLANCHE V. . Euritina intermedia Canu. Roca. Page 247, Amphiblestrum Harmeri Canu. Río Negro. Page 243. . Ogivalia Iheringsiana Canu. Rio Negro. Page 240. . Ogivalia brevis Canu. Río Negro. Page 239. Rhamphonotus Bassleri Canu. Roca. Page 233. Ogivalia Hennigiana Canu. Río Negro. Page 240, . Euritina elongata Canu. Roca. Page 246. 286 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 9. Euritina lata Canu. Roca. Page 245. 10,11. Amphiblestrum subpapillatum Canu. Ric Negro. Page 244. Toutes les figures sont grossies environ 23 fois. Tous les «Types» sont au Muséum National d'Histoire Naturelle de Buenos Aires. PLANCHE VI. 1,2,3. Membraniporella capitata Canu. Rio Negro. Page 251. 4. Ogivalia indistincta Canu. Roca. Page 241. 5. Coscinopleura Brydonei Canu. Roca. Page 249. 6. Coscinopleura planulata Canu. Rio Negro. Page 248, 7,8, 9, 10, Cribrilina insignis Canu. Roca. Page 252. 11. Oygivalia galeata Canu. Río Negro. Page 241. 12. Aspidostoma onychocelliferum Canu. Roca. Page 254, 13. Aspidostoma globiferum Canu. Page 254. Toutes les figures sont grossies environ 23 fois. Tous les «Types» sont au Muséum d'Histoire Naturelle de Buenos Aires, PLANCHE VII. 1,2,3. Micropora convexa Canu. Roca. Page 250. 4. Hiantopora tripora Camu. Roca. Page 256. 5. Hippoporina Normaniana Camu. Roca. Page 258. 6. Hippoporina De Angelisi Canu. Roca. Page 259. Hippoporina gibbosa Camu. Roca. Page 259, 8,9. Ballantiostoma fibrosum Camu. Roca. Page 260. 10,11. Hippoporina planulata Canu. Roca. Page 258. 12,13. Tremogasterina problematica Canu. Roca. Page 256. 14, Cianotremella gigantea Camu. Roca. Page 257. Toutes les figures sont grossies environ 23 fois. Tous les «Types» sont au Muséum National d'Histoire Naturelle de Buenos Aires. PLANCHE VIII. 1,2, 3, 4. Hoplocheilina spectabilis Canu. Roca. Page 262. 9, ovicelle entiére; 3, ovicelle brisée; 4, ancestrule, avicellaire a double orifice. 5,6. Ballantiostoma parvulum Camu. Roca. Page 261. 7. Lagenipora minuscula Canu Roca. Page 266. CANU: BRYOZOAIRES FOSSILES DE L'ARGENTINE. 287 8 a 12. Exochella mutabilis Canu. Roca. Page 263. 8, un gros avicellaire; 10, avicellaire plus petit et quelques pores orige- lliens disséminés; 12, pores origelliens plus nombreux; 11 et 9, pores origelliens nombreux et avicellaire petit, peu distinct. Toutes les figures sont grossies environ 23 fois. Tous les «Types» sont au Muséum d'Histoire Naturelle de Buenos Aires. PLANCHE IX. 1, 2,3. Exochella elongata Canu. Roca. Page 264. 4. Proboscina dichotoma D'Orbieny. Roca. Page 268, 5. Proboscina eburnea D'Orbigny. Roca. Page 267. 6,7. Porella Gregoryana Canu. Roca. Page 265, 8, 9. Proboscina striata Canu. Roca. Page 267. S, grossi 23 fois; 9, grossi 4 fois. 10,11. Porella Levinseni Canu. Roca. Page 265. 10, grossi 23 fois; 11, grossi 35 fois. Toutes les figures non cotées sont grossies environ 23 fois. Tous les «Types» sont au Muséum d”Histoire Naturelle de Buenos Aires. PLANCHE X. 1411. Diastopora (Berenicea) papillosa Reuss. Roca. Page 269, 1, grossi 23 fois; 5, grossi 22 fois; 8, grossi 4 fois; 9, grossi 12 fois; 10, erossi Y fois; différents grossissements pris sur un méme zoarium; avec grosse ovicelle, grossi 12 fois et 6, grossi 4 fois, méme zoarium; 3, grossi 4 fois, 7, egrossi 4 fois et 4, grossi 12 fois sont des fragments d'un trés grand zoarium; 11, grossi 12 fois, ovicelle globuleuse. AS 2 7) 99 dd ad 12 Diastopora (Berenicea) suborbicularis Hincks. Roca. Grossi fois. Page 270. Tous les «Types» sont au Muséum d Histoire Naturelle de Buenos Aires. PLANCHE XI. l a 4. Diastopora (Berenicea) littoralis d'Orbieny. Roca. Page 271. 1, grossi 22 fois; 2, méme zoarium grossi 12 fois; 3, autre zoarium grossi 12 fois, avec de belles ovicelles; 4 petit zoarium grossi 10 fois. 5. Reptotubigera spathulata Canu. Grossi 12 fois. Roca. Page 274. 6,7. Reptotubigera compacta Canu. Grossi 12 fois. Page 273. 6, Roca; 7, Río Negro. 288 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 8,9. Idmonea carinata Roemer. Grossi 12 fois, Roca. Page 275. 10,11. Tubegerina clavata Camu. Grossi 12 fois. Roca. Page 272, 12. Reptotubigera scalaris Canu. Grossi 12 fois. Roca. Page 274. 13417. Phalangella Romeroi Canu. Page 273. 13 et 14, Río Negro, grossis 12 fois; 15 et 16, Roca, grossis 12 fois; 17, méme zoarium que 18 grossi 20 fois. Tous les «Types» sont au Muséum d'Histoire Naturelle de Buenos Aires. PLANCHE XII. , 2, Reptocavea discoidea Canu. Roca. Page 278. 1, grossi 23 fois; 2 méme zoarium grossi 12 fois. 3. Actinopora Robertsoniana Camu. Grossi 12 fois. Roca. Page 276, 4, Actinopora striata Canu. Grossi 12 fois. Roca. Page 277, 5. Actinopora incrassata Canu. Grossi 12 fois. Roca. Page 276, 7. Actinopora complanata Rómer. Roca. Page 277. 1) 6, grossi 12 fois; 7, grossi 4 fois. 8413. Reptocavea excavata Canu Page? 8, grossi 4 fois et 9, grossi 23 fois, méme zoariun de Río Negro; 10, grossi 4 fois et 11, grossi 23 fois, méme zoarium de Roca ; 12, grossi 4 fois et 13, grossi 23 fois, méme zoarium de Roca. Tous les «Types» sont au Muséum d'Histoire Naturelle de Buenos Aires. ERRATA DE LA PREMIERE PARTIE Page 252, ligne 17. Au lieu de /presien, lire Ypresien. 299, 23. Ajoutez: Fam. Smrrribak J. Jullien. 2. Au lieu de Albinga, lire Aldinga. 3. Au lieu de Salielien, lire Sahélien. 23. Au lieu de Cheonoa, lire Theonoa. S. Au lieu de Galiédées, lire Galéidées. 17. Au lieu de «sur nos cótes», lire «sur les cótes europénnes». ERRATA DE LA DEUXIEME PARTIE. Page 216, ligne 21. Au lieu de 1806, lire 1856. » 219, » 2 d'en bas. Au lieu de J. Canu, lire F. Canu. » 220 » 14, Au lieu de Pl. vr, lire Pl. 1. » 239, » 12. Au lieu de Zoécie | lo, lire Zoécie | 1z. > 2286, » 8. Au lieu de Membranipona, lire Membranipora. » 238, » 20. Aulieu de Agita, lire Ogiva. » 289, » 9, Au lieu de Rossehana, lire Rosseliana. » 240, » 4. Au lieu de O. Theringsiana, lire O. Iheringsiana. » 244, >» 9 d'en bas. Au licu de Bush, lire Busk. » 250, >» 3d'en bas. Au lieu de LeviseN, lire LeEvINseN. » 250, » 10. Au lieu de Opésie—Lo = 0.09, lire Opésie—ho = 0.09. » 252 » 5den bas. Au lieu de La =0.11, lire ha =0.11-. » 253, >» 25. Au lieu de Hinckes, lire Hincks. 256, >» 12. Au lieu de La = 0.09, lire ha = 0.09. » 258, » 5, Aulieu de Gen. Hiprrorina, lire HIiPPOPORINA. » 259 » 3. Au lieude La =0.07, lire ha = 0.07. » 261, » 13. Au lieu de La = 0.09, lire ha = 0.09. » 265, » 16. Au lieu de Lp =0.05, lire hp =0.05. » 265, » 31. Au lieu de Lz =0.36, lire Lz = 0.83. » 265, » 81. Au lieu de Lp =0.03, lire hp = 0.03. » 266, » 21. Au lieu de Lp =0.05, lire hp =0.05. » 219, » 22. Au lieu de 1889, lire 1899, » 281, » 5. Aulieu de Reptotabigera, lire Reptotubigera. TABLE DES MATIERES ARO poco OS ES NT Ei oa megatasde de lora la Bryozoaires cheilostomes membraniporoides......ooococococoonrcocoo cor. uyozoarreschellostomes eschariensian. e deso ale IO E ¡BENE ESSE y COS OMS a et ds ab Reparto ndes especes par loca llbes.. 000 otras reel feria io lala» sierto apa reales ole aaa OOO SA SS > | ll “f OPE JA Deir ADA us M o SOBRE LA EXISTENCIA DEL HUEMUL DE BOLIVIA Y PERÚ, ODOCOILEUS CIHMIPPOCAMELUS) ANTISENSIS CORB.) Y DEL AVESTRUZ PETIZO, RHEA DARWINI GoULD EN EL N. W. DE LA REPÚBLICA ARGENTINA POR ROBERTO DABBENE Conservador de las colecciones de Zoología del Museo Nacional de Buenos Aires. El Director del Museo Arqueológico de la Facultad de Filosofía y Letras, doctor Juan B. Ambrosetti, me remitió para la determi- nación de la especie á la cual pertenecen, varios cuernos de ciervo y algunas tibias incompletas de avestruz. Estos restos han sido encontrados en Tilcara, quebrada de Hu- mahuaca, provincia de Jujuy, y en las casas y tumbas de la pobla- ción prehistórica indígena del Pukará, por el citado doctor J. B. Ambrosetti y su ayudante el doctor Salvador Debenedetti, envia- dos por la Facultad de Filosofía y Letras con el objeto de hacer exploraciones arqueológicas en el norte de la República. La población de Tilcara se encuentra áuna altitud de 2.360 metros sobre el nivel del mar y en la región de las altiplanicies de la cordillera andina que se denominan «punas». Según me ha comunicado el doctor Ambrosetti, las astas eran usadas por los indígenas como amuletos, y aun para fabricar di- versos objetos. En cuanto á las tibias de avestruz, eran destinadas probablemente para fabricar algún instrumento de música ó tam- bién, en razón de la dureza del hueso para confeccionar, con las astillas, puntas de dardos. Iguales restos han sido también encontrados, aunque con más rareza, al sur, en los valles calchaquies de la provincia de Salta. Todas esas regiones montañosas del noroeste del Territorio Argentino no han sido aún zoológicamente bastante exploradas, Ana. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 8.*, T. xIv. Junio 6, 1911. 19 994 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AI[RES. y el doctor Ambrosetti se limitó á decirme que había oido hablar de la existencia de ciervos en el valle Calchaqui de Salta, cerca del nevado de Cachi. Las especies de cérvidos que habitan actualmente nuestro terri- torio no son numerosas, y desde luego debo excluir que en esas comarcas elevadas de la región andina se puedan encontrar las. especies que habitan las llanuras del este, como el Odocoileus (Blastocerus) campestris F. Cuv. y Odocoileus (Blastocerus) paludo- sus Desm. ó el Mazama rufus 111. y Mazama nemorivaga Y. Cuv., todas especies en las cuales los cuernos tienen una forma muy distinta de las que aquí tratamos. Entre las especies actuales de ciervos peculiares á la región montañosa de la cadena andina y que hasta la fecha se conocen como habitando también la vertiente argentina, figura únicamente: el Huemul: Odocoileus (Hippocamelus) bisulcus (Mol.), cuya área de distribución actual se extiende, según los modernos autores, desde el estrecho de Magallanes y sobre ambos lados de la Cordi- llera hasta un poco más al norte del paraleio de Valparaiso, en Chile, y hasta el sur de Mendoza en la República Argentina, siendo mucho más común en la parte austral de ambos paises, Esta especie pertenece al género que Wagner (1844) ha llamado Furcifer y cuyos representantes se distinguen de todos los demás ciervos de la América del Sur por sus cuernos en forma de hor- quilla y divididos desde la base, ó arriba de un corto pedúnculo, en dos ramas, una dirigida hacia adelante y la otra hacia atrás. En algunos casos no muy frecuentes, las ramas llevan pitones. Trouessart, en la nueva edición de su «Catalogus mammalium tam viventium quam fossilium>», publicado en 1904-1905, coloca los. huemules en el género Odocoileus de Rafinesque y substituye, siguiendo las reglas de prioridad, al subgénero Furcifer el de Hippocamelus de Leuckart (1816), el cual es más antiguo. Los cuernos encontrados en las sepulturas indigenas de Tilcara pertenecen evidentemente á un representante de este género, cuyas especies hoy reconocidas por los autores é indicadas en el catálogo de Trouessart* son tres, una de las cuales, Odocoilems (Hppocamelus) seleniticus (Amegh.) es fósil y pertenece al plioceno superior de la República Argentina, y las otras dos son el Odocoi- leus (Hippocamelus) bisulcus (Mol.) ya citado y el Odocoileus (Hippo- 1 Loc. cit. p. 707. DABBENE: O. ANTISENSIS Y RH. DARWINI EN N. W. ARG. 295 camelus) antisensis, descubierto por D'Orbigny en las cordilleras orientales de Bolivia y señalado después por Tschudi * en las del Perú, en donde se le conoce vulgarmente con el nombre de «Taru- ga» 0 «Tarusch». Hasta hace relativamente poco tiempo, ha habido una confusión en la sinonimia de estas dos especies. Gray? en 1850 las co- locaba en el género Furcifer, manteniendo por la especie de Bo- livia el nombre especifico antisensis de D'Orbigny y el de huamel de H. Smith por la otra especie del sur que él en 1849 habia llamado leucotis 3, sin reparar que era el mismo animal de- nominado Cervus chilensis en 1846 por Gay y Gervais. Más tarde, en 1869, habiendo el viajero Whitely enviado á Londres desde Tinta, en las Cordilleras del Perú, el cuero y el cráneo de un huemul con cuernos anormales, el mismo autor Gray fundó un nuevo género Anomalocera *, el cual, después, cambió por el de Xenelaphus ?, llamando al huemul del Perú con los nombres de Anomalocera huamel, Xenelaphus huamel, Xenelaphus leucotis y finalmente en 1872, llamó á esa especie Xenelaphus anomalocera, pues encon- tró que era también distinta de la especie de Magallanes denomi- nada por él mismo en 1549 con el nombre de leucotis. En un trabajo publicado por el citado autor en Anm. Mag. Nat. Hist., xt, Ser. 1v. 1813, p. 308, distingue tres géneros y 3 especies de huemules como habitando la cordillera andina: 1.2 Furcifer an- tisiensis de Bolivia; 2.2 Xenelaphus anomalocera de Tinta, cordi- llera del Perú, 3? Huamela leucotis (Capreolus leucotis Gray, Proc. Zool. Soc. Lond., 1869, p. 64, t. xi y Furcifer huamel Gray, P. Z. 5., 1850, 236), del Estrecho de Magallanes. Pertenece á Sclater el mérito de haber aclarado la cuestión, pues examinando el espécimen enviado por Whitely del Perú y conservado en el Museo Británico, reconoció que no era otra espe- cie sino el Cervus antisensis de D'Orbigny con cuernos anormales Ó monstruosos. Varios otros autores, como Philippi * Burmeister” y Ame- 1 Fauna Peruana, Mamm., p. 241, 1844. 2 Proc. Zool. Soc. Lond., 1850, p. 236. 3 Capreolus leucotis Gray, Proc. Zool. Soc. Lond., 1849, p. 64, tab. x:r. 1 Scient. Opinion, Oct. 6, 1869, 385. 5 Proc. Zool. Soc. Lond., 1869, p. 498. s Philippi, in Wiegmann's Archiv. Naturg. 1, 46, 1870 y «El Guemul de Chile», in Anal. Mus. Nac. Chile, Zool., 1892, p. 7. 1 Descr. Phys. Rep. Arg., 1, p. 462, 1879. 296 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. ghino*, han, por el contrario, reunido las dos especies en una sola, ó las han separado simplemente como variedades. Efectiva- mente, las diferencias entre los huemules de Chile y Patagonia y los de Bolivia y Perú no parecen de tal importancia como para separarlos especificamente. Según Gay”? y Gray ?, el huemnl del Sur se distingue del de Bolivia y Perú, por tener los incisivos algo más pequeños, el espacio interorbital más ancho y por el tamaño del cuerpo algo mayor; y según Philippi?*, principal- mente por tener los huesos nasales más largos. Pero como lo han demostrado Brooke *, Sclater * y más recientemente Lydekker * y Allen * y finalmente como yo mismo acabo de observar, parece que difieren también en la altura en la cual empieza la bifur- cación de las dos ramas divergentes de cada cuerno. Lydekker?, sin embargo, el cual ha comparado recientemente, la piel de un huemul del Perú existente en el Museo Británico con otro huemul de Patagonia enviado á ese Museo por el Dr. J. P. Mo- reno, encontró además algunas diferencias en la coloración, como la presencia en la especie del Perú, de un tinte pardo sobre el lomo y un color igual sobre la parte superior del nacimiento de la cola, mientras que estas partes son uniformes y del mismo color del dorso en la especie del sur. No se puede aun afirmar con segu- ridad que estas diferencias en la coloración sean constantes y se encuentren en todos los individuos, pues no se distinguen en las láminas de la obra de D'Orbigny*” ni en la de Tschudi *”. Por consiguiente, creo no se deba atribuir gran valor á las dife- rencias indicadas y se podrían separar todos los huemules que habitan la cordillera andina en dos simples subespecies ó formas geográficas, una de las cuales de mayor tamaño habitaría ambas vertientes de la parte más austral de la Cordillera de los Andes y 1 Mam. fós. arg. p. 611, 1889. 2 Fauna chilena, Zoolog., 1, y. 161, 1847. 2 Ann. Nat. Hist., ser. 1v, vol. xr, p. 309, 1873. + Cersus chilensis, antisensis y brachyceros, in An. Mus. Nac. Chile, p. 13, 1894. 5 Proc. Zool. Soc. Lond., 1878, p. 923 (figura). 6 Proc. Zool. Soc. Lond., 1875, p. 45 (figura). 1 Specific Characters of the Uhilian Guemal. Proc. Zool. Soc. Lond , 1899, p. 917. s Reports of Princ. Univ. Exped. to Patagonia, vol. 11, Zoolog., Part. y. Mamm., p. 14, 1905. OC ACI po 10 Voy. Amér. mérid. Atlas, lám. 20, figura 1. 1 Fauna Peruana, Mamm., lám. 18. DABBENE: O. ANTISENSIS Y RH. DARWINI EN N. W. ARG. 297 la otra se extendería hacia el norte, en la región montañosa del este de la misma cadena hasta el Perú y el Ecuador. Los restos de ciervos encontrados en las tumbas indígenas pre- históricas de Tilcara se componen únicamente de cuernos, por ser esta la sola parte del animal que los indigenas han utilizado, y por consiguiente debo limitarme al estudio comparativo de esos apén- dices para la determinación de la especie. Las astas son muy numerosas, todas separadas de la parte ósea del cráneo en el punto de nacimiento y presentan diferentes esta- dios de desarrollo, habiendo algunas pertenecido ¿ indivi- duos completamente adultos. Lo que á primera vista llama la atención es que todas care- cen de pedúnculo y desde el punto de nacimiento y en la misma corona el cuerno se di- vide en dos simples ramas más ó menos divergentes y de dife- rente longitud, siendo la diri- gida hacia adelante la más cor- ta y más larga la que se diri- ge hacia atrás. Ninguna rama tiene pitones. La figura 1, tomada del tra- bajo de Brooke!, representa el Fig. 1. Cuerno izquierdo de Odocoileus cuerno izquierdo del Odocoi- (Hippocamelus) antisensis (Orb.). leus (Hippocamelus) antisensis «. ramificación dirigida hacia delante. (Orb.) y concuerda perfecta- (de Brooke, P. Z. S., 1878, p. 923). mente con los especimenes en- contrados en Tilcara y figurados en la lámina adjunta al presente trabajo. D'Orbigny ?, describiendo esta especie de ciervo encontrado por él en las cordilleras de Bolivia, dice que es «essentiellement caractérisée par ses bois bifurquées des la menle, á divisions sim- ples, lune dirigés en avant et Vautre en arriére, quoique médio- crement divergentes entres elles». 1 On the Clasification of the Cervidae, with a Synopsis of the existing Species. Proc. Zool. Soc. Lond., 1878, pp. 883-928. 2 Voy. Amér. mérid. Mam., p. 28, 1847. 298 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. En cuanto álas medidas, concuerdan también más ó menos con las que ha dado este último autor. He tomado únicamente las di- mensiones de las astas completas y que parecian haber llegado á su mayor desarrollo, encontrando que la ramificación más corta varia entre 0,15 y 0,17 centímetros y la mayor tiene de 0,20 á 0,24 centimetros de longitud, medidas por la cuerda del arco que forman. La corona es un tanto aplanada lateralmente, presentando gene- Fig. 2. Cuerno izquierdo de Odocoi- leus (Hippocamelus) bisulcus (Mol.). a. ramificación dirigida haciadelante. b. pedúnculo. (de Sclater, P. Z. S., 1875, p. 45). ralmente una forma elipsoidal, y está con frecuencia cubierta de tubérculos y rugosidades. Estas se encuentran también en algunos casos sobre la parte inme- diata de las ramas juntamente con unos surcos más ó menos profun- dos y que llegan hasta la mitad del cuerno, indicando que perte- necian probablemente á unos ani- males viejos. Las extremidades son cónicas, lisas y débilmente inclinadas hacia adentro. La di- vergencia de las dos ramas es variable, como puede verse en los diferentes especimenes de la lá- mina antes citada. En los cuernos del Odocoileus (Hippocamelus) bisulcus (Mol.) se observa por el contrario que á la corona sigue un pedúnculo más ó menos largo el cual se bifurca en dos ramas y en la misma forma de la especie anterior. La figura 2 tomada del trabajo de Selater * representa la forma típica del cuerno del huemul del sur, y lo mismo se puede observar en los cuernos de ese animal figura- dos en la lámina y pertenecientes á la colección del Museo Nacio- nal, En ambos casos el carácter que he indicado es bien aparente. 1 On Cervus chilensis, Proc. Zool. Soc. Lond., 1875, p. 45. DABBENE: O. ANTISENSIS Y RH. DARWINI EN N. W. ARG. 299 Creo que este mismo carácter debe ser constante en cada una de las respectivas especies ó formas, pues los cuernos encontrados en Tilcara en número de más de cuarenta pertenecen todos al primer tipo sin pedúnculo. La distribución geográfica del Odocoileus antisensis (Orb.) es muy vasta y viene á confirmar la suposición de que esta especie se haya extendido y se extienda aún actualmente hasta las altipla- nicies de la parte montañosa del noroeste de la Rep. Argentina. D'Orbigny * dice que el Odocoileus antisensis es peculiar de la vertiente oriental de los Andes, y muy común en las provincias de La Paz, Cochabamba y Chuquisaca, en donde habita las regiones elevadas de la Cordillera, bajando raramente de los 3.500 metros de altitud. Tschudi ? lo ha señalado en el Perú, y según los autores moder- nos su área de distribución se extendería hasta el Ecuador. Cierta- mente, en otros tiempos debía ser muy común también en las provincias argentinas del noroeste, en donde probablemente á consecuencia de la persecución que le hacian los antiguos habitantes de la región, con el objeto de procurarse sus cuernos, ha ido siendo cada vez más escaso. Parece, sin embargo, que no ha desaparecido completamente, y aun deben haber algunos individuos en las comarcas más apar- tadas del oeste de las provincias de Jujuy, Salta y Tucumán. Como ya he dicho al principio del presente trabajo, el Dr. Ambrosetti ha oido hablar de unos ciervos que se encuentran en los valles Calcha- quies, y los señores M. Rodríguez y G. A. Baer, que han hecho colec- ciones de aves en las altiplanicies del noroeste de la República, aseguran haber visto, aunque raras veces, unos ciervos del tamaño de un guanaco, sin que les fuera posible apoderarse de ninguno de ellos. El señor Carlos Bruch, jefe de la sección zoológica del Museo de La Plata y el señor Stewart Shipton, de Tucumán, han cazado varios huemules en Candado y Hoyada, en la parte norte de la provincia de Catamarca, á los 4.500 metros de altitud, y el señor Bruch me aseguró que eran más pequeños que las del sur y que tenian los cuernos diferentes. Es casi seguro que esos ciervos no podían ser otros que el antisen- sis de D'Orbigny. 1 Loc. cit. p. 29. Loc. cit. p. 241. 300 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Las observaciones fidedignas de los viajeros citados, además de confirmar la presencia actual del huemul de Bolivia en el norte de la República, destruyen al mismo tiempo la hipótesis de que los cuernos encontrados en las sepulturas prehistóricas de Tilcara, hayan podido ser traidos de Bolivia y adquiridos de los indígenas de ese pais por los antiguos habitantes de Tilcara. Por otra parte, también la especie de huemul que habita la por- ción austral de la cordillera de los Andes ha debido extenderse mucho más al norte de los límites actuales, especialmente por el lado de Chile. Con motivo de haber sido por mucho tiempo considerada la especie Ó forma que habita el sur como el mismo animal que se encuentra en Bolivia y Perú, la sinonimia ha sido hasta hace poco bastante confusa, por lo cual creo no estará de más indicarla nue- vamente aquí. ODOCoILEUS (HIPPOCAMELUS) ANTISENSIS (Orb.). (Taruga ó Huemul del norte). 1834. Cervus antisensis D'Orbigny, Nouv. Ann. du Mus,, 111, p. 91. 15844. Cervus antisensis Tschudi, Fauna Peruana, Mamm,, p. 241, tab. XVIII. 1847. Cervus antisensis D'Orbigny, Voy. Amér. mérid., 1v. Mamm., p. 23, y atlas, Pl. xx, fig. 1. 1850. Furcifer antisiensis Gray, Proc. Zool. Soc. Lond., 1850, p. 236. 1852. Furcifer antisiensis Grray, Ann. Mag. Nat. Hist., 1x, p. 427. 1852. Cervus antisensis Pucheran, Arch, Mus., tv, pp. 467, 496. 1855. Cervus (Furcifer) antisiensis Wagner, Schreber's Sáug. Suppl. IV, p. 394 y v, 390, 27. 1869. Furcifer antisiensis Gray, Proc. Zool. Soc. Lond., 1869, p. 498. 15869. Anomalocera huamel (nec Furcifer huamel Gray, 1850) Gray, Scient. Opin., p. 385. 1869. Xenelaphus huamel (nec Furcifer huamel Gray, 1850) Gray, Proc. Zool., Soc. Lond., 1869, pp. 497, 498. 1870. Furcifer antisiensis Sclater, Proc. Zool. Soc. Lond., 1870, p. 116, 1572. Purcifer antisiensis Gray, Cat. Rumin. Mamm., in B. M., p.88. DABBENE: O. ANTISENSIS Y RH. DARWINI EN N. W. ARG. 301 1872. Xenelaphus leucotis (nec Capreolus leucotis Gray, 1849) Gray, Cat. Rum. Mamm., p.59 (part.). 1872. Xenelaphus anomalocera Gray, Ann. Mag. Nat. Hist., Ser. 1v, b. x, p. 445. 1873. Xenelaphus anomalocera Gray, Ann. Mag. Nat. Hist., Ser. Iv, t. x1, pp. 220, 309, 1873. Xenelaphus chilensis (nec Cervus chilensis Gay y Gervais), Gray, Ann. Mag. Nat. Hist. xt, p. 161; id., Hand-List of Edent. p. 159. 1873. Cervus antisiensis Sclater, Ann. Mag. Nat. Hist., Ser. Iv, vol. XL pu 213: 1873. Furcifer antisiensis Gray, Ann. Mag. Nat. Hist. Ser. 1V., 6. XI, pp. 308, 309; id., vol. xrr, p. 162. 1873. Cervus antisensis (part.) Philippi, Anal. Univ. Chile, t. xLrr, 1873, p. 120. 1873. Cervus antisiensis Brooke, Proc. Zool. Soc. Lond., 1873, p. 518. 1874. Furcifer chilensis (part.) Gray, Ann. Mag. Nat. Hist., x111, p. 332. 1875. Cervus antisiensis Selater, Proc. Zool. Soc. Lond., 1875, p. 46. 1878. Cariacus (Furcifer) antisiensis Brooke, Proc. Zool. Soc. Lond., 1878, p. 923 (fig. cuernos). 1879. Cervus chilensis, var. antisiensis Burmeister, Descr. Phys. Répub. Arg,., 111, p. 462. 1886. Furcifer antisiensis Nehring, Sitzb. Gesell. Naturf. Freunde, pl; 1895,. p. 9: 1889. Furcifer bisulcus (part.) Ameghino, Mam. fós. arg., p. 611. 1892. Cervus chilensis (part.) Philippi, El Guemul de Chile, in An. Mus. Nac. Chile, Zool., pp. 1-9, 1894. Cervus antisensis Philippi, Cervus antisensis, chilensis y brachyceros in: An. Mus. Nac. Chile, Zool, p. 6, Tab. 1, fig. 2. 1897. Cariacus (Furcifer) antisiensis 'Trouessart, Cat. Mamm., p. 397. 1898. Mazama antisiensis Lydekker, Deer of all Lands, p. 295 pl. 23. 1904-1905. Odocoileus (Hippocamelus) antisiensis Trouessart, Cat. Mamm., Suppl., p. “07. 1905. Hippocamelus antisiensis Allen, in Rep. Princ. Univ, Exped. to Patagonia, Zool., vol. 11. Part. 1, Mamm,, p. 14 (in texto). Distrib.: Cordilleras Orientales del Ecuador, Perú, Bolivia y N. W. Argentina. 302 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. OpocoILEUs (HIPPOCAMELUS) BISULCUS (Mol.). (Huemul ó Guemul). 1182. Equus Bisuicus Molina, Sagg. Stor. Nat. Chile 1.% Edit, p. 320. 1788. Equus bisulcus Gmelin, in Linné, Syst. Nat. Ed. 13%, 1 p. 209 (ex Molina). 1803. Camelus equinus Treviranus, Biol., oder Phil. leb., Nat. 11, p. 179. 1811. 4Auchenia ? Huemul, lliger, Prodromus syst. Mamm. et Av., patbk 1816. Hippocamelus dubius Leuckart, De Equo bisulco Molinae p. 24; Isis, 1825, p. 362 (ex Molina). 1827. Auchenia huamel Ham. Smith, in: Griffith's An. King,, y, p. 300 (ex Molina). 1829. Lama ? bisulca J. B. Fischer, Synops. Mamm., p. 433 (ex Molina). 1842. Cervus (Cervequus) andicus Lesson, Nouv. Tabl. du Régne Anim., p. 173 (= Equus bisulcus Molina). 1846. Cervus chilensis Gay et Gervais, Ann. des Sci. nat. (3), v, p. 91, Chile: descripción original. 1847-1854. Cervus chilensis Gay, Hist. Chile, Zool., 1, p. 159, pl. xr. 1849. Capreolus leucotis Gray, Proc. Zool. Soc. Lond., 1819, p. 64, pl. x11. (Cerca de Port Famine, Magallanes), et Ann. and Mag. Nat. Hist. (2), v, p. 224 (1850). 1850. Capreolus ? Huemula Gray, Knowsley Menagerie, 1, p. 66. 1850. Furcifer huamel Gray, Proc. Zool. Soc. Lond., 1850, p. 236; Ann. and Mag. Nat. Hist. (2) 1x, May, 1852, p. 427; Cat. Mamm. Brit. Mus., Ungulata Furc., 1852, p. 227. 1852. Cervus chilensis Pucheran, Arch. Mus., vi, p. 434. 1855. Cervus (Furcifer) chilensis Wagner, in: Schreber, Sáugeth. Supp. 4, p. 382. 1855. Cervus leucotis Giebel, Die Sáugethiere, p. 359. 1855. Cervus chilensis Baird, in: Gilliss, U. S. Naval Astron. Exp. to the South. Hemisph., 11, Zool., Mamm,, p. 171. 1870, Furcifer chilensis, Sclater, Proc. Zool. Soc. Lond., 1870, p. 166. , DABBENE: O. ANTISENSIS Y RH. DARWINI EN N. W. ARG. 3083 1872. Xenelaphus leucotis Gray, Cat. Rum. Mamm., p. 89 (part.). 1872. Huamela leucotis Gray, Ann. and Mag. Nat. Hist. (4), x, Dec. p. 445; ibid., xt, March, 1873. pp. 214-219 (figura del cráneo); Hand-List Eden., Thick-skinned, and Rum. Mamm. Brit. Mus., 1873, p. 160. 1873. Cervus chilensis Sclater, Ann. and Mag. Nat. Hist, (4), xi, p. 213. 1873. Cervus chilensis (part.) Philippi, Anal. Univ. Chile, 6. xLn, 1813, p. 721. 1873. Creagroceros chilensis Fitzinger, Sitzb. Akad. Wien, LXVIH, p. 338; ibid. LxxviH, 1819, p. 372. 1875. Cervus chilensis Sclater, Proc. Zool. Soc. Lond., 1875, p. 44 (figura cuernos y sinonimia). 1875. Equus bisulcus Burmeister, in Wigmann's Arch. Naturg,, polo. 1878. Cariacus (Furcifer) chilensis Brooke, Proc. Zool. Soc. Lond., 1878, p. 923. 1879. Cervus chilensis Burmeister, Descr. Phys. Rép. Arg., ni, p. 462 (part.). 1883. Furcifer chilensis Sclater, List Anim. Zool. Gardens, p. 178. 1885. Furcifer chilensis Nehring, Sitzb. Gesell. Naturf. Freunde Berlin, p. 183; ¿bid., 1895, p. 16. 1887. Cervus chilensis C. Burmeister, Anal. Mus. Nac. Buenos Aires, Ser. 1, vol. 3, p. 240. 1889. Furcifer bisulcus Ameghino, Mam. fós, arg., p. 611 (part.). 1892. Cervus chilensis (part.) Philippi, El Guemul de Chile, in Anal. Mus. Nac. Chile, Zool., p. 1-9, tab. 1. 1894. Cervus chilensis Philippi, Cervus antisensis, chilensis, bra- chyceros, in Anal. Mus. Nac. Chile, Zool., tab. 1, fig. 1. 1898. Cervus bisulcus Matschie, Sáugethiere, in: Ergeb. Hamb. Magalhaens. Sammelreise, 111, 4, p. 19. 1898. Cervus bisulcus Holmberg, Fauna arg., Mam., in: Seg. Censo Rep. Arg., p. 493. 1898. Curiacus (Furcifer) chilenxis Trouessart, Cat. Mamm., n. 5554, p. 397, 1898. Mazama bisulca Lydekker, Deer of all Lands, p. 296; idem. Proc. Zool. Soc. Lond., 1899, p. 917, pl. 1xr, y fig. in texto. 1598. Hippocamelus bisulcus Thomas, Proc. Zool. Soc. Lond., 1895, p. 212. (Chubut). 1899-(1900). Furcifer andicus Lahille, Congr. Cient. Lat. Amer., npo 190. 304 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 1900. Mazama bisulca Berg, Comunic. Mus. Nac. Buenos Aires, 1, No 7, Oct. 1900, pp. 250-263. 1902. Xenelaphus bisulcus Prichard, Proc. Zool. Soc. Lond., 1902, 1, p. 172; id., Through Heart of Patagonia, 1902, p. 146 (descrip. y lam. cráneo). 1903. Cariacus chilensis Hatcher, Narrative Princeton Univ. Exp. Patagonia, 1, pp. 185, 211. 1905. Hippocamelus bisulcus Allen, in Reports of the Princ. Univ. Exp. Patagonia, Vol. 11, Zool., Part. 1. Mamm. p. 11; Pl. 1v, v, VI. : 1905. Odocoileus (Hippocamelus) bisulcus Trouessart, Cat, Mamm.,, Suppl., p. 107. Distrib.: Patagonia occidental, desde el Estrecho de Magallanes al sur de Mendoza; Chile central y meridional. Las tibias de avestruz encontradas en las sepulturas de Tilcara son de distintos tamaños, y algunas han debido pertenecer á indi- viduos muy grandes y completamente adultos. Todas están incompletas, careciendo la extremidad proximal de la epifisis y teniendo la otra cortada en la diáfisis, un poco más arriba de su terminación. Por la forma en que este hueso ha sido trabajado se ve que debía estar destinado á servir como instrumento musical. En estas condiciones, es muy dificil poder determinar con segu- ridad á cuál de las dos especies de avestruces que habitan la parte austral del continente sudamericano pertenecen las tibias en cues- tión. Aun tratándose del examen de estos mismos huesos comple- tos, no se podría llegar á una conclusión segura en el caso de ejemplares completamente adultos y más ó menos de la misma edad. Según Cunningham !, en la tibia de Rhea americana (Linn.) existe una fuerte cresta procnemial sobre el proceso epicnemial, mientras que en Rhea Darwini Gould este proceso y la cresta apa- 1 Notes on some points in the Osteology of Rhea americana and Rhea Darwi- nii, in: Proc. Zool. Soc. Lond., 1871, p. 109. DABBENE: O. ANTISENSIS Y RH. DARWINI EN N. W. ARG. 305 recen mucho menos desarrollados. El mismo autor dice que en la segunda especie se nota la separación de la epifisis en la extremi- dad del hueso, mientras que en la primera hay una anquilosis y la separación sólo está indicada por una línea rugosa. Estas observaciones han sido hechas sobre un ejemplar joven de Rhea Darwini, y con el avanzar de la edad las diferencias indicadas van desapareciendo, como también admite el citado autor, de modo que esos simples caracteres no pueden servir para la determinación de la especie. Lo mismo se puede decir, si nos fundamos solamente en las dimensiones que presenta este mismo hueso, pues entre el avestruz común y el petizo no existe siempre una diferencia considerable en la longitud de la tibia. Aunque Rhea Darwini es de un tamaño bastante más pequeño que Rhea americana, la diferencia en las dimensiones no está en la longitud de los miembros posteriores, sino especialmente en la del cuello y del tronco, los cuales son más cortos en la primera especie. Como lo ha demostrado H. Gradow*, estas dos especies de Rhea no concuerdan completamente en la proporción de sus miembros respecto á la distancia atlas - acetabular, y Rhea Darwini es la que tiene relativamente las extremidades posteriores más largas en comparación á la longitud del cuello y del tronco. La longitud de las tibias y de los tarsos es casi la misma en las dos especies y en ningún caso creo posible una determinación exacta fundada únicamente sobre este carácter. A mijuicio, la única guía para la averiguación de la especie en el presente caso, es la distri- bución geográfica y las costumbres de cada una de las dos especies. Rhea americana es de vasta distribución y parece habitar princi- palmente las extensas llanuras situadas al norte del Río Negro, desde las faldas de la Cordillera Andina al Atlántico en la Argen- tina, el Oriente de Bolivia y los campos del Brasil central y meri- dional, del Paraguay y del Uruguay. No parece que esta especie remonte á mucha altura en las mon- tañas; y el dato que me ha comunicado el señor Eduardo Carette ?, 1 On the Anatomial Differences in the three species of Rhea, in: Proc. Zool. Soc. Lond., 1885, pp. 312-317. 2 Dabbene, Catal. sist. y descript. aves argent. in: An. Mus. Nac. Buenos Aires, Ser. 3”,t. x1, 1910, p. 181. 306 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. respecto á los avestruces vistos en Cerro Pelado, Mendoza, á los 2.500 metros de altitud, me ha hecho pensar que debe probable- mente tratarse de la Rhea Darwini. Esta últina especie habita también las llanuras bajas de la Pata- gonia, desde los Andes al Atlántico; pero como muchas otras espe- cies de aves pertenecientes á la subregión llamada Patagonico- andina, su área de distribución se extiende también mucho más al norte, sobre las altiplanicies de la Cordillera de los Andes. Ya Philippi* había señalado la existencia del avestruz petizo cerca de Mendoza y también lo cita ? como muy común en el desierto de Atacama y en la parte este de la Cordillera. Berkeley : James * asegura haber visto estos avestruces en el mismo distrito y á una altura de 12,000 pies. El naturalista A. Lane *, los obtuvo en Canchosa, provincia de Tarapacá, en Chile, y el señor Pfister me ha comunicado por inter- medio del Dr. Kurt Wolffhúgel de haber visto un avestruz que no puede ser otro que Rhea Darwini, en Acaí, Territorio de Los Andes y á los 4.400 metros de altitud. Menegaux *, en un trabajo sobre las aves recolectadas por la Misión Francesa en las altiplanicies de Bolivia y del Perú meridio- nal, menciona también un avestruz, aunque sin indicar la especie. En fin, Berlepsch y Stolzmann * citan la Rhea Darwini en el departamento de Puno, en el Perú, y á la misma especie deben pertenecer los avestruces que el Dr. Salvador Debenedetti dice haber visto en el Perú durante su último viaje. Queda por consiguiente demostrado que la Rhea Darwini no se halla solamente confinada á la Patagonia al sur del Río Negro, como antes se crela, sino que su área de distribución es mucho más extendida hacia el norte y se encuentra en gran parte de Chile, en donde remontando hacia el norte pasa á las altiplanicies de las cor- dilleras que se encuentran también en el noroeste de la argentina y avanza por la cadena andina hasta el Perú. 1 Anal. Univers. Chile, xxx1, p. 270, 1868. 2 Ornis, 1v, p. 159, 1888. 3 Sclater, Proc. Zool. Soc. Lond., 1890, p. 412. * Ibis, 1897, p. 316; y Sclater, Proc. Zool. Soc. Lond., 1891, p. 136. 5 Etude d'une collection d'viseaux provenant des hauts plateaux de la Bolivie et du Pérou mérid., in: Revue Franagise d'Ornith. 22 Annés, N.* 9, 1910. 6 ¡Ornis, x11x, p. 131, 1906. DABBENE: O. ANTISENSIS Y RH. DARWINI EN N. W. ARG. 307 Por la situación en la cual se encuentra la población de Tilcara, justamente en la región de la puna, creo que es casi seguro que las tibias encontradas en las sepulturas indígenas prehistóricas deben pertenecer á esta especie, la cual seguramente ha de encontrarse aun actualmente. Espero que en ocasión de otro viaje á las mismas regiones el Dr. Ambrosetti podrá conseguir los despojos de un avestruz y de ese modo será fácil y seguramente resuelta la cuestión. e? | rs Ap 'e aria e xd me Mi E sie ME A he ao ps ps sad; e ¡bit hárino bash A 2h aii ae A, 42% 2 EEE PI ¡ay put nn" un fuen Jal ¡meso ¡PEA e ' ñ vo pe” RA Í IS 4 atrasa ¿IS UN E Haas Pe A A ar "Ta uipel Pr) NOA DIAN Ab L1d4 ¿fas dal ' y o j "e ” Ñ ¿ - ed re Pa. rs sc end o E a y E ' á . - $0 1F dé] me A" ME 8) E D 5 y Í _ ' IM o W o Ñ y BUENOS AIRES EN 1536 POR ANÍBAL CARDOSO. Encargado Honorario de la Sección de Numismática. ADVERTENCIA. Invitado á formar parte del «Congreso de Americanistas», comencé el presente trabajo que no me fué posible terminar en oportunidad, por hallarme ocupado en escribir otro sobre moneda colonial, y por carecer del tiempo necesario para el estudio de los documentos históricos y del terreno de Buenos Aires, en su cons- titución física y en su flora, no sólo aqui, sino también, como ele- mento comparativo, en la isla de San Gabriel y costa oriental. Debido á este retardo, presenté el trabajo, en un resumen, al «Congreso Científico Internacional Americano», que se reunió dos meses y medio después, dando lectura de él en la Sección de Arqueología, de cuya Comisión he tenido el honor de formar parte. Transcribo á continuación un párrafo del acta respectiva, para salvar un error que, mal interpretado, puede dar lugar á dudas desfavorables. SESIÓN DEL 19 DE JULIO DE 1910. «Acto continuo hace uso de la palabra el señor Aníbal Cardoso, disertando sobre Buenos Atres en 1536. Terminada la lectura del trabajo del señor Cardoso, el doctor Ameghino pide la palabra para manifestar que, en su concepto, el Riachuelo corría entonces por el sitio que hoy corre. Apoya la opinión del señor Cardoso en un todo. No se detendrá en cuestiones de orden lógico que pueden invocarse en la primera fundación de Buenos Aires; él se apoyará simplemente en razones de orden científico, especialmente geológicas, para demostrar que no existe razón alguna para admitir que el Riachuelo de Barracas ha cambiado de curso. AnaL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, Tr. xv. Juro 4, 1911. 20 10 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. El doctor Ameghino se extiende en consideraciones tendientes á esta demostración. El señor Cardoso recuerda nuevamente el evidente error en que caen algunos autores en este asunto y con ellos los que los trans- criben. El profesor Ambrosetti, ilustra el tópico diciendo que él fué uno de los que tomó el dato de Trelles, convenciéndose más tarde de que ese autor estaba en error, que era lo contrario gracias á las comprobaciones hechas mediante los hallazgos realizados en los alrededores de la casa de gobierno, donde se había constatado la existencia de cementerios * indios que se habian instalado, desde luego, en la meseta y no en los bañados. El señor Aníbal Cardoso, apoya la ampliación hecha por Ambro- setti y se extiende con nuevo acopio de datos. El señor Lafone Quevedo, pregunta si existe algún dato feha- ciente respecto de la verdadera fecha de la fundación de la ciudad. El señor Cardoso explica las probabilidades en pro y en contra de los años 1534 y 1535 respectivamente. El señor Lafone Quevedo, toma nuevamente la palabra para aclarar este debatido tema. Se ha hallado un nuevo manuscrito de Schmidel, cuyas fechas deben adaptarse, es decir, las que ese his- toriador asigna, hasta tanto nuevos documentos no determinen lo contrario. Por su parte, cree que el día de la fundación debió ser el 3 de Febrero, día de San Blas, patrono del Plata. El señor Lafone, se extiende en consideraciones de orden reli- gioso y que debieron influir en el ánimo de los conquistadores para la fundación de la ciudad de Buenos Aires. Esas cuestiones, en que él está versado, son suficientes para llevar la fecha de la fundación á la que él indica. Varios miembros hacen moción para que se cierre el debate, y suficientemente apoyada, se aprueba.» Debo salvar un error deslizado en la redacción del acta. Me refiero á los años 1534-35, de Schmidel, que son en realidad, 1535-36, Contestando al señor Lafone Quevedo, que me preguntó, por qué contaba mis fechas desde fines de Diciembre de 1535, manli- festé: que Schmidel y Villalta empleaban para las suyas el «Año 1 Otro error — «paraderos», dijo el Sr. Ambrosetti. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 10596. SE del Señor», que comienza el 25 de Diciembre, y que calculaba desde esa fecha en un mes, más ó menos, el tiempo que empleó Mendoza en buscar un buen paraje en la «costa del Oeste» y hacer preparativos para desembarcar en ella, lo que efectuó el día de Nuestra Señora—24 de Enero ó 2 de Febrero—dando á la ciudad ese nombre, señalado en el Calendario en ambas fechas; costum- bre muy O en aquel tiempo para indicar los sucesos prircipa- les y designar los puntos ocupados por los conquistadores. Nunca he podido referirme á los años 1534-35, de Schmidel, que son un error en su cronología; como lo he demostrado mucho tiempo antes en un modesto trabajo publicado en la «Revista de Educación de la Provincia de Buenos Aires». (Agosto de 1905). Salvado este error del acta, debo hacer una pequeña aclaración: El presente trabajo, ha sufrido varias modificaciones, produ- ciendo cierta dislocación en su conjunto. Escrito en un resumen, para poder dar lectura de él en los 20 minutos que nos señalaba el Reglamento del Congreso para hacer las exposiciones, fué luego reconstruido y aumentado para las publicaciones finales del Congreso y más tarde extractado, separando la parte histórica, (1536-41) —que publico separadamente—para sólo dejar la que se refiere al aspecto físico y geológico del terreno y costa de Buenos Aires. En cuanto á la importancia que reviste este asunto, ella es evidente. Se trata del punto preciso en que se fundó, en 1586, la ciudad de Buenos Aires, primer establecimiento español de la conquista, en el Río de la Plata; y, si para apoyar la errada creen- cia de una mala ubicación, se invocan datos históricos y gráficos que revelan un error geológico evidente, es necesario—para esta- blecer la verdad—aclarar las citas mencionadas y restaurar el terreno, tal como debió ser, con otras citas históricas más fieles; con datos cientificos más claros, y con razón geológica más incon- trastable. Para obtener este resultado, era necesario destruir una leyenda que se esboza y restaurar un pasado quese esfuma. Esto no era posible, sin producir hechos nuevos, para desvanecer las dudas que dejan los otros; circunstancia que me obliga á señalar citas históricas—lo más breve y conciso posible—en una revista cienti- fica destinada á publicaciones de otro género. Espero que el lector, benevolente, sabrá disculpar esta invasión extraña—que es necesaria como Moda probatoria—en obsequio ú% la importancia del asunto. 319 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. INTRODUCCIÓN. Entre los puntos más interesantes de nuestra historia, se desta- can, seguramente, la llegada al Plata de la expedición de Mendoza y el sitio exacto en que se fundó la ciudad de Buenos Aires, primer establecimiento «á la entrada de su conquista». De estos dos pun- tos, el primero ha sido aclarado hace pocos años, fijándolo á prin- cipios de 1536; el segundo, colocando la Ciudad en los terrenos bajos del Riachuelo: error que me propongo demostrar, y es el argumento de este resumen. Los historiadores de aquellos tiempos, abarcando los sucesos en conjunto, parcos en los detalles y poco prolijos en las fechas, nos han dejado bastante material histórico de que servirnos, pero, tan plagado de errores y contradicciones que es casi imposible encon- trar dos que estén de acuerdo en todo el conjunto del relato; esto es, cuando el mismo autor no se contradice, como pasa con Schmidel, nuestro primer historiador, actor y testigo en la con- quista, quien embrolla los sucesos y equivoca los años, siendo el causante de que se fijara la fundación de Buenos Aires en 1535, lo que no impide que su relato sea de un gran valor histórico, aun- que caresca de prolijidad y precisión en los detalles. Ruy Díaz de Guzmán, hijo del conquistador Alonso Riquelme de Guzmán y nieto de Irala, escribió su «Historia del Descubri- miento y Conquista del Rio de la Plata», por narraciones que 0yó de los primeros conquistadores y documentos que tendría oportu- nidad de consultar, siendo, como era, nieto del Grobernador y Capi- tán General de estas Provincias. Además de este conjunto de datos históricos, ya muy respetable, tenía el conocimiento de los parajes, pueblos y costumbres de los indios, y datos precisos de los ríos y puertos, obtenidos por estudios personales ó por relatos minuciosos de los navegantes. Ambos libros, son, á mi juicio, la principal fuente de la historia de la conquista del Río de la Plata y de ellos me serviré, robuste- ciéndolos con otros documentos de la época, para el asunto que trato de aclarar. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 313 Si el atraso de un año señalado, por Schmidel para suarribo al Plata, dió por resultado que gran cantidad de historiadores euro- peos y americanos indicaran la fundación de Buenos Aires en 1535, una frase de Ruy Díaz de Guzmán mal interpretada, dió lugar á la creencia de que Mendoza edificó su Real en el bañado del Riachuelo. Dice Ruy Díaz, que Mendoza, al llegar á nuestras playas—hoy Buenos Aires —«entró los buques mas pequeños en el Riachuelo, del cual media legua arriba fundó una poblacion, que puso por nombre la ciudad de Santa María el año de 1536». Esta frase tomada en el sentido de que Mendoza levantó su Real «en el Ria- chuelo media legua arriba», dió lugar al error señalado y siendo luego repetido se hizo tradición y aunque no hay documento que compruebe la exactitud de tal aserto y sí datos importantes que lo destruyen, se ha generalizado y forma parte de la historia de nuestra Ciudad. Como la elección del terreno resultaba poco lógica, prefiriendo el bañado del Riachuelo á la alta meseta de Buenos Aires, se apoyó la idea en una cita interesada y posiblemente falsa de Ruiz Galán y en un mapa antiguo del cual resulta que el Riachuelo corría delante de Buenos Aires, al pie de la barranca, teniendo su entrada frente á la calle Victoria. En ese terreno bajo, de la mar- gen del Riachuelo, es donde se ha supuesto que Mendoza levantó su Real y fundó á Buenos Altres. El presente resumen tiene por objeto rechazar dichas conclu- siones. No acepto la teoría de que el Riachuelo haya corrido frente á la barranca de la ciudad. Rechazo en absoluto la fundación de Buenos Aires, «en los terrenos bajos de la margen del Riachuelo». Admito que Mendoza, al desembarcar, mientras se levantaba su Real y se construía su casa, arriba de la meseta, ba permanecido en carácter provisorio en la playa de Buenos Aires, al pie de la barranca, por espacio de dos ó tres meses á lo sumo; lo que expli- caría la frase del Capitán Gouzalo de Mendoza, que dice textual- mente en el párrafo 8 de su Información: « luego que dicho don « pedro de mendoza fue allegado a esta provincia en el puerto que « dicen de buenos aires, donde primeramente fundó y acentó su « Real y pueblo, tuvo los navios surtos de su armada, (etC.)... » y como Don Pedro de Mendoza no fundó otra ciudad que Buenos Aires, de la mencionada cita se desprende que el Capitán Mendoza 314 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. dejó el Real del Adelantado en la playa, el 3 de Marzo de 1536 y lo halló á su regreso, en Octubre, sobre la meseta? He dicho anteriormente que la idea de la fundación de Buenos Aires en el Riachuelo, se basaba en una cita del Gobernador Ruiz Galán, que considero interesada ó falsa, y en un antiguo plano, sin fecha, que carece de exactitud. La cita mencionada pertenece á la Información de Ruiz Galán, de 3 de Junio de 1538, y refiriéndose á este mismo Grobernador, dice: «el ha fecho en este puerto quatro iglesias á costa de la « hacienda del señor Adelantado, las cuales por ser cubiertas de « paja se han quemado algunas de ellas é otras se llevó las cre- « cientes en este rio...». Debemos tener presente, que aqui se habla de río y no del Riachuelo y que mientras Ruiz Galán fué Gobernador de Buenos Aires, no tenía la ciudad más de doscientos habitantes y por consiguiente bastaba con una iglesia, de la cual hay testimonios que la hizo. Por lo tanto, ó se refiere en conjunto á todas las iglesias que él hizo construir en Asunción, Corpus Cristi y Buenos Aires, ó falsea los hechos para captarse la volun- tad del monarca y poderoso clero de España, con fines políticos y de ambición personal. En cuanto al plano en cuestión, lo considero tan imperfecto en detalles como todos los de aquella época, en que se carecía de ins- trumentos de gran precisión y en que los navegantes no tenían los conocimientos y tiempo necesarios para entrar en detalles minu- ciosos, apurados por descubrir mucho, aunque luego se perdiera lo descubierto por no haberlo fijado con precisión. A propósito de esto, no debemos olvidar que todavía buscamos en aquellos famosos mapas «de la época», cuál de entre todas las seiscientas islas del archipiélago de las Lucayas, es la isla Gua- nahani ó San Salvador, á donde arribó Colón el 12 de Octubre de 1492, pues historiadores y hombres de ciencia, como Humboldt y Washington Irving, indican la isla de Cat; Muñoz y el Capitán Becher, la de Watling; Varnhagen quiere que sea la Mariguana, y Navarrete señala la de Turck. | Colón tuvo la culpa de este enredo, pues dejó de fijar la posición de dicha isla, aunque tal vez, si lo hubiera hecho, lo hubiera hecho 1 Domingo Martínez, en su carta de 2 de Julio de 1556, dirigida al emperador Carlos V, habla de los servicios que prestó «en la primera habitacion de Buenos Ayres», etc. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 15936. 315 mal, dado el medio que empleaba en fijar la latitud de un lugar, «como solo podía calcularla un empírico ignorante». Baste saber respecto de esto que calculó para la costa de Cuba 42” de latitud en lugar de 21”. (Dr. Sophus Ruge, en Hist. Univ. de G. Oncken.— Traduc. Esp. Barcelona, 1890). En el mapa de los editores del Ptolomeo de Strasburgo: «Tabu- la Terranova», 1513; en la obra: «Amerigo Vespucci» Varnhagen. Edición de Lima, 1865, la isla de Cuba ocupa una extensión de 26 á 38% de lat. N., es decir, desde el extremo Sur de la Florida hasta la boca del Potomac; según los datos de Colón, habría llegado á la altura de Boston!! Ante este embrollo geográfico en puntos históricos de tal mag- nitud y descubrimientos de tanta resonancia, debemos confesar que tienen todavía mucho que hacer los que se ocupan de historia americana, y que no basta aclarar la confusión de fechas de la historia de nuestro país y en unir los datos relativos á los distin- tos asuntos para obtener algo exacto, sino también, revisar y cote- jar prolijamente los vetustos mapas y estravagantes planos que nos han dejado los primeros navegantes, pilotos y dibujantes que vinieron á nuestro puerto, algunos de los cuales parecen mapas de escolares, sin que resistan los mejores un examen detenido, cuando se les coteja con nuestros mapas modernos. Algunos de esos antiguos planos fueron tomados como la exacta reproducción topográfica del terreno y costa de Buenos Aires en el siglo XVI y de ahí sacaron como consecuencia que el Riachuelo ha pasado, en un tiempo, contra la barranca de Lezama hasta enfrentar la calle Victoria, presentando tal vez, el único caso en la geografía hidrográfica, de que un débil afluente al llegar á 300 metros de su lógico y natural desagúe, doble bruscamente en ángulo recto, elija para labrar su cauce el suelo de mayor resisten- cia, recorra media legua en contra de la pendiente del terreno y otra media en contra de la corriente de un río caudaloso, en cuyo lecho labra una «canaleta» para cauce de sus aguas, Fácil me sería aceptar estas creencias que resultan ventajosas á mis ideas, pues acercan el Riachuelo á la barranca y por consl- guiente no tendría dificultad en demostrar que la ciudad de Buenos Aires se fundó sobre la meseta, pero, desgraciadamente, hay no sólo dificultades hidrográficas que vencer, sino, también, una razón geológica que salvar: la dureza del subsuelo existente y el banco de tosca que cubría la playa del río en ese paraje, que nos dice bien claro que si allí pudo haber un desagúe del bañado, no pudo, m6 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. en cambio, ser el lecho de un riachuelo, navegable para los buques menores de Mendoza. Para terminar la parte referente al antiguo plano de Buenos Aires, cuya exactitud discuto, adjunto algunas copias reducidas de mapas y planos de distintas épocas á fin de que puedan juzgarse los errores que contienen por las enormes diferencias que existen entre ellos mismos, por no ser producto de un verdadero levanta- miento topográfico. Prescindiendo del mapa del «Viaje de Schmidel», edición de Levinc Hulsio—año 1599—en que se ve la ciudad de Buenos Aires al Sur de una gran bahia—que sospecho sea el valle anegadizo del Riachuelo —y el pueblo de Buena Esperanza de los Timbús, colo- cado en las islas del delta del Paraná, debajo del rio Luján; comenzaré mi refutación por el viejo mapa de la antigua Audien- cia de Buenos Aires, que ha sido calcado sobre una copia exis- tente en el archivo que fué del General Mitre. Este plano—sin fecha, ni firma—ofrece particularidades muy notables. Enfrente á la Boca del Riachuelo y ocupando el sitio que hoy cubren las poblaciones de Barracas al Norte y Sur, nos presenta una extensa” bahía, perfectamente limpia de islas y de bancos. El Riachuelo corre con una anchura de más de una cua- dra en algunos parajes y 300 metros antes de llegar á su natural desembocadura, dobla bruscamente al Norte en ángulo recto y estrechando su anchura hasta un tercio de su primitivo caudal, va á salir enfrente de la calle San Juan, á 300 metros de la barranca. Más tarde abre una nueva boca (en donde lógicamente siempre estuvo) y se lanza en el río más ó menos como lo hace hoy. Esta nueva desembocadura, E., es la cue Trelles llama del «Tragi- nista». Entre el primer cauce, el río de la Plata y el Traginista, queda una isla larga y angosta que la veremos reproducida en el plano topográfico de Cerviño (1814). La meseta es angosta, redondeada frente al río y se interna hacia el Oeste sin ensancharse mucho. Sobre ella se ha trazado malamente, parte de la mensura de la ciudad en tiempo de Garay (1550), señalándola con las letras A. A., pero, como no concilian sus rumbos con las suertes de chacras del Norte de la ciudad que van hacia las Conchas (letra C), se ha trazado un segundo Ejido CARDOSO: BUENOS AIRES EN 15836. 3% SÓ El original de este plano existe en el Archivo de la AS antigua Audiencia de Buenos Aires y sobre él ha sido calcada esta copia en Septiembre de 1£82.—B. Mirre. E-M ===> o Z SS a o, > ñ "ny, - ED] mermar” d pS Ea! AA y mo py, < A Ez ás Tn, A A 20 _S a 1110 11) e EZ az 2 [eb] 5 A [eb] rd o) la] 3 le) (3) a [eb] ro [a] a] [eb] ES E A E >» y EA o 3 ga : E pr) man y MP ; a » Y Ñ 2 [ab] 3 O a] A A. A. Traza de la ciudad de Buenos Aires, 24 cuadras de N. á S. correjido desde la hermita de San Sebastián hasta la zanja de Ruy Díaz. B. B. Exido de esta ciudad de Noroeste á Su- deste, con declinacion meridional de 16 y medio grados, los cuales rumbos se declararan al Exido y Chacras en 1608, como conformes á la situación de la tierra y comodidad de sus habitantes. A. A. A'” A” Exido que hoy tiene esta ciudad de N. á S., correjido,—digo de Sest á Ouest, correjido. C. Punto de la barranca de donde comenzó el reparto de las chacras que van para el río de las Conchas. D. Guardia del Riachuelo y Boca del puerto de Santa M. de Buenos Altres. E. Boca nueva. F. Boca del Riachuelo de Maciel. 318 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. con las letras B. B., que resulta peor, por lo cual se vuelve al pri- mero y se extiende al Oeste en la forma indicada en la mensura de 1608. Este Ejido, A. A., no corre por su frente de Norte á Sur, como dice la citada mensura, sino más bien de N. O. 4S. E. Se ve, pues, que los rumbos del plano (obsérvese la flecha) están coloca- dos de acuerdo con los rumbos señalados en la mensura á las cha- eras de uno y otro lado de la ciudad, pero no con ésta, siendo por lo tanto falsos y quedando desmentidos, sin excusas ni apelación, por el edificio del Cabildo, ya existente cuando se hizo el plano, por la mensura del Ejido «cuyo frente corre de Norte á Sud», y ante la posición verdadera de las barrancas que es la actual. Podrá objetarse algunas modificaciones en el delta del Riachuelo, pero la posición de la meseta está fuera de discusión y ella desmiente de un modo terminante la exactitud del plano de la referencia. Don Manuel Ricardo Trelles publicó una parte de este plano en el «Registro Estadistico» de 1859. En dicha copia no figura el tra- zado del Éjido letra B, que se ha juzgado con sobrada razón, per- fectamente inútil. En cuanto á la parte del cauce del Riachuelo, que no acepto, dice que «fué cegándose gradualmente durante los dos primeros siglos del descubrimiento del surgidero hasta obli- garle 4 abrir nueva boca, descubierta á fines del siglo XVIIT por un lanchero, cuyo nombre nose ha conservado, conocido popular- mente con el nombre de El Traginista, que el público aplicó tam- bien á la nueva boca». ¡Valiente descubrimiento el del lanchero Traginista! La salida directa del Riachuelo al rio de la Plata, debe ser tan antigua como la existencia de aquél y figura en todos los mapas viejos que he examinado; estando bien determinada en el mapa de don Manuel de Cano, de 1736: en el de los Pilotos Reales, de 1770: y en el de 1789 (cuyas copias acompaño), haciendo presente que este último es más exacto que los otros y que el Riachuelo se lanza al Plata por entre dos bancos de arena, dejando á su izquierda el «Banco de la Ciudad», entre el cual y la ribera de Buenos Aires existía un paraje de mayor profundidad que ha sido, indudable- mente, el fondeadero de los buques de Mendoza. El plano topográfico de don Pedro Cerviño, de 1814, es más pro- lijo y exacto que los anteriores y presenta un trabajo muy respe- table. En él se ve una isla larga y anegadiza, separada de la costa por un riacho angosto en el que hay dos pasos ó puentes y la inscripción: «Cauce antiguo del Riachuelo que se va cegando». Este riacho, la isla y la Boca, son la reproducción del falso Ria- CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 319 chuelo, la isla y la Boca «nueva» del Traginista, del plano de la Andiencia de Buenos Aires, pero, más sabiamente dibujado, de acuerdo con medidas y triangulaciones precisas que nos dan una idea clara de la topografía del terreno y las distancias que existían entre los distintos puntos de la ciudad. Y si he rechazado el plano Descripción del Río de la Plata, por D. Manuel de Cano, Piloto Mayor de S. M., 1736. de la Audiencia por los errores que contiene, acepto éste por su mayor exactitud, observando únicamente que el llamado «Cauce antiguo del Riachuelo» no es otra cosa que un canal entre los ban- cos ¿islas de su delta, alimentado y trabajado, no por las aguas del Riachuelo, sino por las mareas y corrientes del río de la Plata, 320 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. cuyo constante desnivel se nota hoy mismo dentro de la Dársena Sur y diques del puerto. Si se comparan con el plano de Cerviño, los de Bacle, de 1836; Sourdeaux, de 1850 (7); Glade, de 1567, ó con cualquiera otro plano «topográfico», se verá que coinciden la forma y anchura de la meseta, los recortes de la playa y la posición del Riachuelo. En los mapas antiguos no existe esa semejanza á causa de su mala contección y no sólo se altera la posición y desagúe del Riachuelo, sino también la forma de la meseta y los rumbos de las calles de la ciudad. Basta observar la posición del Norte en los cuatro mapas topográficos citados y compararlos con el plano de la Audiencia, para darse cuenta de que este es un trabajo hecho «á ojo» y sin relevamientos ni estudios de ningún género. Considero por lo tanto inútil, aceptar como bueno un plano semejante y apo- yarse en él para sacar en conclusión que por hallarse un riacho de poca importancia cerca de la meseta, se ha de levantar una ciudad sobre aquél y no sobre ésta. Arroyos como ese, se ven en los planos de Bacle, Sourdeaux y otros, figurando el delta del Riachuelo, pero, ni han sido navegables, ni se ha podido edificar pueblos en sus orillas; por eso mismo, vemos colocada en el plano de la Audiencia la casilla de la «Guardia del Riachuelo», D, tierra aden- tro, cerca de la verdadera boca, E, y no en la otra que, cubierta de vegetación acuática y sin profundidad, no tenía importancia alguna. El señor E. Madero en su «Historia del Puerto de Buenos Aires», al aceptar como buenas la cita de la Información de Ruiz Galán y un plano antiguo, que no publica, agrega: «Lo que de esta Información se deduce, está confirmado en una Descripcion de la Ciudad y Virreynato de Buenos Aires que existe en Madrid en el «Vepósito de Ingenieros Militares»; cuya descrip- ción empieza asi: «Esta gran capital fué situada á la entrada del Riachuelo, bajo el glorioso título de Santa María de Buenos Aires, y últimamente trasladada y reedificada en una loma inmediata de mayor altura y extensión *, donde hoy se halla, intitulándose de nuevo La Santísima Trinidad, dejando al Puerto del Riachuelo su primitiva advocación.» Madero no nos dice la fecha del libro á que se refiere, el que por 1 Aquí existe una comparación. ¿Cuál es la otra loma de menor altura y exten- sión? Téngase presente que, en mi opinión, Mendoza instaló su Real en la parte más baja de la meseta, frente al río (Independencia y Paseo Colón). 321 CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. *OULALOL) OAPIJ “10d “pT8T OUR [9 OPeyurAs] 'S9ITY SOU 9P PPPNID TP] AP ooIyRIsodo¡ OUe[g Co (I0UIY SI 1 8 a, 9 O 1 e UA 10, Y S e 5 Ss ez 0 E AN Z N 5 » 5 N Ze S S AZ MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. una parte parece algo moderno cuando habla de «gran Capital» y por otra muy antiguo al decir «últimamente», pero de todos modos, hay en él alguna precipitación cuando señala una ciudad en la meseta que es La Santísima Trinidad de Buenos Aires y un pueblo en la Boca que se llama: Puerto de Santa María de Buenos Aires. La falta de fecha y mayores datos no permite orientarse sobre el alcance de la frase «últimamente trasladada y reedificada,» pues como Garay no hizo tal operación, podría referirse por alguna . noticia que llegó al autor del libro, al traslado que, «de su Real y Pueblo», hizo Mendoza ó6 Ruiz Galán, de la playa á la meseta. En cuanto á que la Boca del Riachuelo se ha llamado en tiempo de Mendoza, Puerto de Santa Maria, es un error. En aquel tiempo llevaban el nombre de la ciudad todas sus inmediaciones, pero, el «Puerto», era el río de la Plata frente á la meseta, como consta de la carta-poder firmada por Ruiz Galán ante el Escribano Real el 2 de Abril de 1539 «estando dentro de lanao «Trinidad» que está varada en este dicho puerto de Buenos Aires», y es sabido que la «Trinidad» no entró nunca en el Riachuelo á causa de su calado. Garay, por su parte, al fundar á Buenos Aires, dice: «hoy sábado, dia de Nuestro Señor San Bernabé, 11 dias del mes de Junio del año del nacimiento de Nuestro Redentor Jesucristo de 1580, estando en este puerto de Santa María de Buenos Aires, que esen las provincias del Rio de la Plata, «., «.,» lo que está de acuerdo con el documento de Ruiz Galán. Además, la mayor parte de los documentos de la época, están fechados «En la Ciudad de la Tri- nidad, Puerto de Santa María de Buenos Aires», lo que demuestra una vez más que el «Riachuelo» no tuvo la importancia que se le quiere dar, ni llevó, tampoco, nombre distinto de la ciudad. Esta falta de proligidad en el autor del libro, hace dudar de la exactitud de sus datos; y como es muy frecuente hallar en libros antiguos grandes errores al señalar la ubicación de pueblos y ciu- dades, no vacilo en afirmar que la cita del libro mencionado es una de ellas. Algo semejante á este asunto, pero en sentido contrario, ocurre con la ciudad de México. Cortés, don Antonio de Solís, Bernal Diaz del Castillo y otros historiadores, nos hablan de que aquella ciudad estaba edificada dentro del lago de Tezcuco y, la vista panorámica del libro de Solís y el «plano de la laguna de México» de la edición mexicana de Clavijero, así lo demuestran. Mas tarde las obras de desecamiento por derivación de las aguas hacia el CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. HAD mar y el levantamiento del terreno, han dejado la ciudad en seco, como puede verse en la «Carta hidrográfica del valle de México», por la Comisión de la Vallée, en 1862; pero, contra la realidad que tenemos á la vista, está una tradición perfectamente documentada y el terreno mismo que es una demostración evidente de la realidad de aquélla Con Buenos Aires pasa todo lo contrario. Edificada en terreno seco de la meseta, «media legua arriba del Riachuelo», como dice terminantemente Ruy Díaz; sin que su principal historiador, Schmidel, ni Villalta, Gonzalo de Mendoza, Pero Hernández, Bar- tolomé Garcia y otros que nos han dejado relatos de aquellos hechos en que fueron actores y testigos; ni Mendoza, Irala, Ruiz Galán y otros Gobernadores y altos personajes que han dejado documentos de aquella época, nos digan una palabra del Riachuelo, lo que prueba que no le reconocían importancia alguna; ha bas- tado una mala interpretación de la frase de Ruy Díaz, para señalar al Riachuelo como punto elegido para fundar la ciudad, y á fin de cimentar esta opinión se ha echado mano de planos, citas y refe- rencias equivocadas ó falsas que nos han mantenido en el error, así como en el error estuvimos hasta hace muy poco sobre el año de la fundación de Buenos Aires, pues la equivocada fecha indicada por Schmidel, reproducida sin observación por autores españoles y americanos, estuvieron á punto de perpetuarlo. México, situada en un salitral, sale á tierra firme conservando su tradición perfectamente documentada por la naturaleza y por los hombres. Buenos Aires, fundada en una meseta, pierde la suya y sin documento alguno que lo justifique va á parar al pantano — á orillas del Riachuelo que intencionalmente se desvía—en contra de las leyes de la naturaleza y la lógica de los hombres. Este modo de apreciar la capacidad de los fundadores de ciuda- des, no es único entre nosotros. Hace escasamente treinta años que el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires fundó la ciudad de La Plata cerca del puerto de la Ensenada, y los diarios de la oposición, los adversarios políticos y, también, los indiferentes que no se molestan en buscar la verdad, levantaron una formida- ble campaña tendiendo á demostrar que la ciudad se edificaba en un bañado. Algunas lluvias que anegaron las calles, sin desagúes aún de la naciente Capital, dieron motivo á terribles acusaciones, sin recordar que Buenos Aires, mucho más artigua y con más recursos de saneamiento, se inundaba también cuando llovía torrencialmente, como suele inurdarse hoy mismo en algunos 374 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. barrios, especialmente el que se le quiere asignar á Mendoza como lugar de su predilección. Un error en la cronología de Sechmidel, hizo decir á muchísimos historiadores de renombre, que Mendoza llegó á Buenos Aires en 1535; una falsa interpretación del texto de Ruy Diaz, ha hecho escribir á otros que nuestra capital fué fundada en el Riachuelo. La repetición de este error se transformó en una tradición y como aún no ha sido prolijamente estudiado este asunto, se persiste en la misma creencia de antes, como sucedió con el error de Schmidel, hasta que bien estudiados los documentos se llegó al estableci- miento de la verdad. Quizá muy pronto, también, se descubra algún escrito en los archivos que evidencie de un modo indisenti- ble la tesis que sostengo, ó sean estos apuntes aprovechados y de- sarrollados con mayor claridad por pluma más hábil, más elo- cuente y más galana que la mía. CAPÍTULO LI LLEGA AL RÍO DE LA PLATA LA EXPEDICIÓN DE MENDOZA. La expedición de Don Pedro de Mendoza, salió de España (San- lúcar) el 1.2 de Septiembre de 1535. La armada se componía de 11 navios entre grandes y pequeños, y la tripulaban 2.000 hombres, españoles, alemanes y flamencos, acompañados de un pequeño grupo de mujeres. Algunos escritores han querido variar este número disminuyéndolo, pero, además de estar establecido por la autoridad de Schmidel, como historiador y testigo, se halla refor- zada por la opinión de otros autores y por la comprobación de haberse incorporado á dicha armada varios destacamentos que se agregaron en el camino, con lo que se pasa largamente aquella cifra. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1596. 325 En las Canarias se incorporaron á la expedición tres buques más y algunos días después, sorprendida la armada en alta mar por un recio temporal, pierde un buque y se divide, continuando una parte su ruta bajo el mando de Don Diego de Mendoza *, mien- tras la otra á las órdenes del Adelantado se detenía en Rio de Janeiro de donde tuvo que alejarse precipitadamente, desmorali- zada y disminuida por muchas deserciones, después de la injusta ejecución de Osorio. Continuando la marcha los cinco buques de Don Pedro, llega- ron al río de la Plata donde encontraron fondeada el resto de la escuadrilla frente á la isla de San Gabriel, sobre la costa oriental, «donde tomamos tierra el dia de los Tres Reyes de 1535 »?. Ya Don Diego había aprovechado los días de ventaja que tenía sobre la armada de su hermano, para reconocer el rio en la parte descu- bierta por Solís en 1515 y por Gaboto en 1525, explorando la ribera derecha del Plata desde la boca de las Palmas hasta el Riachuelo, exploración que probablemente no continuó por encontrar al Sur de este punto la costa «muy rasa, llana, desabrigada y de malos puertos» ?, Reconocidas las costas, Don Diego de Mendoza á fin de no per- manecer ocioso mientras llegaba su hermano con el resto de la expedición, hizo cortar «grandes árboles de la Isla de San Gabriel para preparar tablazon para bateles y barcos con que pasar el rio á la parte del Oeste»*. En dicha operación se hallaba, cuando arribaron los buques de Don Pedro, quien encontró todo preparado para el desembarque, cosa que bien lo apuraba por obtener algu- nos viveres frescos, ya que tan mal provisto de ellos partió de Es- paña. Sus soldados deseaban asimismo bajar á tierra y el Ade- lantado se habría establecido alli 4 pesar de la mala fama de los indios (Charrúas) de aquella costa, si no fuera que, con la llegada de los nuevos buques, llegara también á4 los hombres de la otra armada la noticia de la ejecución de Osorio, causas que la moti- varon y deserción de gran parte de sus partidarios. Esta noticia produjo un efecto desastroso entre las gentes de Don Diego y aún este mismo declaró en voz alta: «Plegue á Dios ' Ruy Díaz de Guzmán. Capítulo X. ? Viaje de Schmidel, según el manuscrito de Stuttgart, editado por J. Mond- schein. Debo á la atención del Sr. Lafone Quevedo, el haber podido tomar este dato de una traducción que ha hecho de dicho manuscrito. ¿Ruy Díaz de Guzmán. Cap. IV. ¿Ruy Díaz de Guzmán. Cap. XI. Ana. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xIv. JuLto 5, 1911. 21 326 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. que la falta de este hombre y su muerte, no sean causa de la per- dicion de todos! ». Frase leal y franca, brotada del corazón honrado y valiente de un caballero de aquellos tiempos, pero pésima por su efecto, para la escasa ilustración y torpes creencias de sus soldados. El resultado no se hizo esperar: después del estupor vino la reac- ción y con ella el disgusto, el murmullo, la insubordinación; se habló de desertar para irá pie hasta el Brasil á juntarse con los que habian quedado allí, y hasta sospecho que hubo quienes lo hicieron, sin que los datos históricos permitan afirmarlo ?. Ante esta situación, Don Pedro no vaciló en recurrir á un medio enérgico y seguro que lo salvara momentáneamente de tan apurada posición: cruzar el río y desembarcar en la ribera derecha, ya explorada por Don Diego. Con este medio perdía un buen puerto, pero ganaba en cambio, porque impedía las deserciones poniendo coto á la desobediencia; tenía probabilidades de hallar víveres y de encontrar indios más humanos que los Charrúas; hallarse más cercano al Perú, siéndole más fácil trazar un camino que lo llevara al pais del oro: sueño constante de aquella gente; motivo de su arriesgada empresa; fuerza irresistible que los empujaba. Tomada esta resolución, trató Mendoza de ponerla en práctica, enviando inmediatamente á la descubierta sus mejores oficiales para que estudiaran la topografía del terreno y condiciones de puerto en el punto de la costa que seguramente indicó Don Diego. ' « Y dando órdenes de pasar á aquella parte, fueron algunos á ver la disposicion de la tierra, y el primero que saltó en ella fué San- cho del Campo, cuñado de Don Pedro, el cual vista la pureza de aquel temple, su calidad y frescura, dijo: que buenos aires son los de este suelo! De donde se le quedó el nombre. Y considerado bien el sitio y lugar por personas inteligentes, vieron ser el más acomo- dado que por allí había para escala de aquella entrada» ?, Como se ve, porel párrafo que subrayo, la elección del terreno en que se fundó Buenos Aires no fué hecho á tontas y á locas, aún cuando los acontecimientos hacía se procediera con alguna preci- pitación. Estudiado el paraje por «personas inteligentes» y ele- gido el punto en que debía fundarse la nueva ciudad, «determinó Don Pedro hacer allí asiento y al efecto mandó pasar á aquella 1 Al desembarcar en Buenos Aires, Mendoza pasó lista á sus hombres y sólo encontró 1.700. No es posible que en el naufragio de un buque hubiera perdido tantos como le faltaban. 2 Ruy Díaz, Cap. XI., «personas experimentadas»—en edición Angelis. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. TAN parte toda la gente, y dejando los navíos de más porte en aquel puerto con la guardia necesaria, se fué con los restantes al de Bue- nos Aires, metiendo los más pequeños en el Riachuelo, del cual media luega arriba fundó una población, que puso por nombre la ciudad de Santa María, el año de mil quinientos treinta y seis, donde hizo un fuerte de tapias de poco más de un solar en cuadro, donde pudiese recoger la gente y poderse defender de los indios de guerra, los cuales luego que sintieron ¿4 los españoles, vinieron á darles algunos arrebatos, por impedirles su población y no pudiendo estorbarles se retiraron sobre el Riachuelo de donde salie- ron un día y mataron como diez españoles que estaban haciendo carbón y leña y escapando algunos de ellos, vinieron á la ciudad donde avisaron lo que había sucedido?. Intencionalmente subrayo algunas frases que nos dan la clave necesaria para formarnos una idea de la topografía del terreno tal como era entonces y las posiciones que ocuparon los españoles, en el río y en la costa. Conocidos estos puntos tan importantes de la cuestión, podremos señalar con mayor certeza dónde se fundó la ciudad y de dónde le llevaron los ataques los indigenas para destruirla. Con estos datos agregados á distintos fragmentos de nuestros primeros historiadores de la conquista; con otros de nuestra tra- dición porteña, y con vestigios todavía existentes de la topografía del terreno de aquella época, me permitiré reconstituir la meseta de Buenos Aires, tal como era en 1536. Ofrezco, en cambio de tal atrevimiento, ceñirme en lo posible á la verdad histórica cuando pueda apoyarme en datos seguros y á la razón cientifica, cuando deba reconstruir por deducción lo que ya no existe. 1 Ruy Díaz Cap., XI 328 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. CAPÍTULO IIL ELECCIÓN DEL TERRENO. En los parajes que he bosquejado en el capitulo anterior, fué donde los enviados á la descubierta por Don Pedro de Mendoza eligieron un sitio para puerto de sus buques y asiento de una ciu- dad; previo estudio del terreno, por «personas inteligentes» en tan delicado asunto, que venian con dichos exploradores. ¿Cuál fué el sitio elegido? Schmidel no señala el lugar, pero dice que Mendoza, «mandó pasar á la otra banda del rio y allí levantamos una ciudad que se llamó Bonas Ayers». Villalta, declara que Mendoza «mandó poblar el pueblo de Buenos Aires, que es de la otra banda del rio que dicen el Paraná». Ambos, testigos presenciales de aquellos hechos, no mencionan para nada el Riachuelo, tal vez por considerarlo cosa muy secundaria: tampoco lo mencionan, Pero Hernández, Gonzalo de Mendoza, Isabel de Guevara, Bartolomé Garcia y otros que fueron actores en aquellos sucesos. Ruy Diaz de Guzmán, que escribió mucho más tarde, dice: «dejando los navios de más porte en aquel puerto (San Gabriel) con la guardia nece- saria, se fué con los restantes al de Buenos Aires, metiendo los más pequeños en el Riachuelo del cual media legua arriba, fundó una población, que puso por nombre la ciudad de Santa María», etc. Ya tenemos en Ruy Díaz un dato más seguro que, desgraciada- mente, ha sido mal interpretado. Yo entiendo que la ciudad de Buenos Aires fundada por Mendoza, lo fué sobre la meseta, cuyas barrancas hacia el Sudeste se hallan sobre la margen del Río de la Plata media legua arriba del Riachuelo, mientras otros escritores que se han ocupado del asunto, desechando tomar como punto principal nuestro caudaloso rio, optan por su débil afluente, y á fin de colocarla población en sus riberas, lo sacan de su cauce natu- ral para hacerlo correr por delante de la meseta hasta enfrentar la calle Victoria. En un párrafo anterior he copiado una cita de Ruy Díaz en que dice: Mendoza «envió á ver la disposicion de aquella tierra» ya explorada por don Diego, «y considerado bien el sitio y lugar CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 329 por personas inteligentes, vieron ser el mas acomodado que por allí había para escala de aquella entrada». ¿Quiénes eran esas personas inteligentes? Escuchemos la opinión del General Mitre, cuya paciente proli- jidad en asuntos históricos está fuera de toda discusión: « Procedentes en su mayor parte de las Provincias de Viscaya y Andalucía, tralan en su temperamento étnico las calidades de dos razas superiores, altiva y varonil la una, imaginativa y elástica la otra. Nacidos y criados una gran parte de ellos en comarcas labo- riosas, en puertos de mar como Cádiz, Sevilla y San Lúcar, en ciu- dades como Madrid, Toledo, Valladolid, Córdoba, Zaragoza y Sala- manca, tralan en su mente otras nociones prácticas y otras luces, que faltaban á los habitantes de los valles y aldeas de Estrema- dura, de Galicia ó de Castilla la Vieja, que dieron su contingente á la colonización del Perú, en la que su más grande caudillo no sabía ni escribir su nombre»!, Esta era, la «muy hermosa y lucida gente; compañía para pare- cer bien en el ejército de César, y en todas las partes del mundo», de que hablan el cronista Herrera y el historiador Oviedo. Estos hombres los vue—según Azara— «fueron, sin duda, los mas distin- guidos é ilustres entre los conquistadores de Indias». Al pisar nuestras playas, encontraron esos hombres el terreno que he descripto anteriormente. A un lado las altas barrancas llenas de hermosa arboleda ostentando su lujuriante vegetación estival, perfumada por la floración de esa época del año; al otro lado el valle pantanoso, desolado y triste de los bañados del Ria- chuelo, con sus juncales monótonos, sus pajonales espesos y sus cangrejales movedizos y traidores. ¿Y es posible creer que «esos hombres inteligentes» designados por Mendoza para elegir el terreno, y los que tras ellos venian, flor de la caballería de España, obtaran por el hediondo bañado en+lugar de la fragante meseta que arrancó á Sancho del Campo su frase tradicional? Evidentemente, no! Podria haberlo elegido un Pizarro, que fué porquero en sus mocedades, pero nunca un gentil hombre de cámara del emperador Carlos V. Cuando sobre un campo desconocido y desierto, se elige el terreno para instalar una colonia, un campamento ó una casa, se elige siempre un paraje que reuna condiciones especiales de soli- 1 Mitre. —Historia de Belgrano.—Tomo I, pág. 14. 330 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. dez del terreno; altura suficiente para ver á la distancia evitando inundaciones y sorpresas; agua de la mejor calidad y lo más cerca, posible; leña y materiales de construcción en las cercanías; tierras de buena clase para las huertas y chacras; árboles de sombra y buenas praderas para la hacienda. Nada de eso se hallaba en el bañado: todo eso se hallaba en la meseta. No era posible vacilar y se optó por ella, como pienso demostrarlo con algunos indicios que nos han dejado los mismos historiadores de la conquista, ya que la pura y buena lógica no convence por sísola. Permitaseme, pues, quebrar una lanza en defensa de los fundadores de Buenos Aires. El más entusiasta partidario de la fundación de la ciudad en el bajo, es el señor E. Madero en su «Historia del Puerto de Buenos Aires»; basando su afirmación en un documento firmado por el Gobernador Ruiz Galán en 1538, del que sólo publica algunas líneas, aun cuando afirma poseer copia legalizada en forma. El señor Madero era muy optimista á propósito de documentos, y debemos recordar que al principio de su libro, censurando injus- tamente la obra de Ruy Díaz, le desconoce hasta exactitud en la fecha del fallecimiento de su abuelo Domingo Martínez de Irala, ocurrida en 1557. Pues bien; esta refutación del señor Madero resulta errada y Ruy Díaz está en lo cierto cuando dice que Irala murió en 1557. Así lo demuestra el señor Clemente L. Fregeiro en su «Examen de la Historia del Puerto de Buenos Aires». (Revista del Museo de La Plata.—Tomo 5). El General Mitre, maestro en asuntos de historia, opina que los documentos históricos no tienen valor alguno tomados aislada- mente. Y el señor Fregeiro, hablando más claro, declara que no basta un documento solo para probar un hecho. «Es forzoso no olvidar nunca—agrega—que la fuerza de la demostración consiste con harta frecuencia, en la multitud de indicios diversos, cada uno de los cuales tomado aisladamente, no bastaría á determinar una convicción prudente en cuanto á la certeza del hecho discutido, pero cuyo concierto es inexplicable en el supuesto de una false- dad». (Pág. 68, obra citada). Pero, oigamos al señor Madero: «En cuanto al sitio donde se fundó la primera población—dice — CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. ll poseo copia legalizada de una Información (inédita) hecha por el Teniente Gobernador Francisco Ruiz Galán, con fecha 3 de Junio de 1538, ante los escribanos Melchor Ramirez y Pero Hernández, de lo ocurrido aquí desde que don Pedro de Mendoza regresó á España; y de ella se deduce que aquella población se fundó en los terrenos bajos de la margen del «Riachuelo de los Navios», cuyo cauce se extendía hasta el frente de la parte Sud de la ciudad actual; pues en la información se dice que se habian «fecho en este puerto quatro iglesias á costa de la hacienda del señor Ade- lantado, las cuales por ser cubiertas de paja se han quemado algu- nas de ellas é otras se llevó las crecientes en este rio». Y es claro, que esto no hubiera sucedido, si las iglesias hubieran estado en la meseta alta, donde hoy existe la ciudad». Aun cuando ya he refutado esta opinión de Madero en la Intro- ducción á este trabajo, quiero explicar el motivo que me hace rechazar como inexacta esa parte de la Información del Goberna- dor Ruiz Galán y poner en duda la seriedad de ese documento. Como dicha Información, al referirse á las cuatro 1glesias, habla en plural primero de las quemadas y luego de las llevadas por las crecientes, parece que se trata de dos iglesias en cada caso, y, como no creo que los 160 hombres de Ruiz Galán construyeran cuatro iglesias á la vez para tan poca gente, quiero admitir —como lo más favorable 4 ese documento—que ellas fueron dos que se improvisaron en tiempo de Mendoza—tal vez bajo la dirección de Ruiz como hombre aficionado á estas cosas—una en la meseta, próxima al Real y la otra en el Riachuelo, donde habitaban los mari- nos de los buques menores anclados allí; ranchos que fueron incen- diados por los indios durante el sitio de la ciudad. Después de este desastre, quedó Ruiz Galán como Teniente Gobernador de Buenos Aires, con 160 hombres, habitando en los buques y playa del rio, pues no se atrevería ha hacerlo en la meseta por temor á los indios. Allí, en esa playa, bajo la protec- ción de la artillería de los buques y al lado de los botes siempre listos, construyeron sus ranchos los soldados en los primeros días, y Ruiz Galán, con su habitual religiosidad, improvisaría una ó dos capillas pobrisimas que se llevó el rio en la primera creciente. Estas han sido, tal vez, las ponderadas iglesias de la famosa Información: documento de circunstancias, hecho intencional- mente con citas falsas, con el objeto de engañar al Soberano y con- seguir el apoyo del poderoso Clero de España. No me es posible admitir de otra manera la construcción de las TD MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. capillas que menciona la Información, pues no creo que Ruiz Galán persistiera en repetir la edificación en un paraje que inva- dían las aguas del río, pues en tal caso se habrian llevado también el resto de la ciudad, aunque no nos lo diga el documento ni el señor Madero; y esta circunstancia deben tenerla en cuenta los partidarios de la fundación de la ciudad en terreno bajo. En cuanto á las dudas que abrigo á propósito de la exactitud de las citas de aquel documento, voy á explicarlas en extracto: Dice Ruiz Galán en su Información, que cuando Mendoza lo dejó en Buenos Aires, «no había bastimento mas de para 5 6 6 meses, ni bergantines en que lo poderirá buscar». Que en Corpus Cristi morían de hambre y que él los socorrió enviando «rescates y construyendo bergantines para poderirá buscar viveres para los de Buenos Aires»; que mandó sembrar mucho maíz, etc. Si en Octubre de 1536, pudo Gonzalo de Mendoza construir tres bergantines, bien podía, con mayores facilidades, hacerlos Ruiz Galán en 15371; como se ve que los hizo, aunque trata de hacer constar su esfuerzo en todos los casos. En cuanto á los socorros enviados con tanta frecuencia á pueblos en que era más abun- dante la comida, son citas que demuestran los deseos de exhibirse que tenía Ruiz Galán. Mas adelante dice que vino Zalazar y le dijo que « había cons- truido una casa sobre el rio Paraguay donde había abundancia de víveres», y le trajo muestras de metales finos, aconsejándole que fuera allí «porque estarian mas cerca de la entrada de la Sierra de la Plata», etc. Entonces encuentra Ruiz Galán cinco bergantines para subir el río hasta la Asunción, pero se lamenta de que allí tuvo nuevas difi- cultades por falta de víveres y que «halió mucha hambre», pero él salvó la situación ocupándose un mes en saltear los pueblos de los indios para quitarles la comida; después de lo cual volvió á la Asunción «donde hizo una iglesia», etc. Baja después á Corpus Cristi, «donde estaban los Tembues nuestros amigos», construye otra iglesia y les deja maiz y rescates, etc., regresando luego á Buenos Aires. Durante todo este relato—como en el resto de la Información— Ruiz Galán no dice una palabra de que recibiera socorro de nadie; todos venían sin «bastimento», aun cuando Morales y Zalazar venian de «pueblos ricos en comida», según él mismo declara. En cambio él, aparece como un salvador de ]a situación, llevando socorros, víveres, herramientas y rescates; pero se abstiene de CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 300 hablar de la forma que empleó para robar los víveres á los indios paraguayos y de la matanza inicua de Corpus Cristi, en que lo acompañó como cómplice el mismo escribano Pero Hernández que relata con tanta prolijidad la mencionada Información. Dice más adelante que, al regresar 4 Buenos Aires, encontró en dicho puerto «una nao y una carabela que habían venido con gente, los que no traían bastimento para se poder sustentar». Esto no es cierto: el mismo Pero Hernández, en el párrafo 6 de su Memoria, en 1545, declara (olvidando la famosa «Informacion» del año 38) que la nao de Pancaldo «venía cargada de mercaderias é muchos vinos finos é algunos bastimentos con lo cual se reformó la gente que allí residía»; recibiendo por lo tanto, Ruiz Galán, un socorro en vez de darlo. En cuanto al otro buque, anunciador de la llegada de Cabrera, venía cargado desde España con toda clase de «vituallas», para auxiliar á4 los conquistadores. Mas adelante, llegamos al párrafo que nos interesa: «e porque el á fecho en este puerto cuatro iglesias ácosta de la hacienda del señor Adelantado, las cuales por ser cubiertas de paja se han que- mado algunas de ellas é otras llevado el rio, el dicho señor teniente de gobernador deshizo una nao grande é hizo una iglesia de las tablas é maderas de ella», etc. Luego agrega: «é porque la necesi- dad del bastimento es tanta que no comen los soldados mas de ocho onzas de maíz, su merced envía un galeon bien aderezado y con buena gente á la costa del Brasil para que traiga basti- mento», etc. Ruiz Galán llegó á4 Buenos Aires á mediados de Mayo, de modo que dispuso de unos veinte días (hasta el 3 de Junio), para des- hacer la nao «grande» y construir la iglesia con las maderas de ella; tarea en que tomó parte el mismo Ruiz Galán. Más adelante veremos el motivo de tanto apuro. En cuanto á la necesidad de enviar un buque á la costa del Bra- sil en busca de víveres, y de que «no hay bastimento en todo este rio, ni donde al presente se pueda aver»; es aseveración muy falsa, pues además de haber recogido 145 fanegas de maiz (incluso el diezmo), se obtenían provisiones de los Timbús y Asunción y de los dos buques que recién llegaban; recursos muy suficientes para que los hombres de Ruiz Galán esperaran la llegada de Cabrera, que estaba con el otro buque en Santa Catalina *. Claro es que Ruiz 1 Y asi lo dispuso el destino. El buque enviado con Gonzalo de Mendoza el 4 de Junio, naufragó el 1.? de Noviembre y sólo arribó á Buenos Aires el que mandaba Cabrera, algunos días después. 3394 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Galán no quiere confesar que con sus crueldades acababa de pri- varse de los recursos que obtenía de aquellos «indios amigos» pero, el motivo de enviar un buque al Brasil es otro. Schmidel refiere (capitulo xxIx), que después de los sucesos san- grientos de Corpus Cristi, bajaron todos 4 Buenos Aires, donde había escacez de víveres, «pero unos cinco dias despues de nuestro arribo á Bonas Ayers nos llegó de Hispanien una pequeña nao lla- mada carabelle y nos trajo buenas nuevas, á saber, que un navío mas habia arribado á Santa Katarina, cuyo capitan del mismo llamado Aluiso Gabrero, había traido de Hispanien 200 hombres. NI BIEN SUPO nuestro capitan las tales nuevas, hizo aprestar de los dos navios uno, que era un galiber (galeón) y lo despachó con el primero á Santa Katarina en Presael» (Brasil). Aauí está el punto céntrico y principal de la cuestión: Ruiz Galán, que ambicionaba heredar de Mendoza y Ayolas el Gobierno de la Provincia, se hallaba enemistado con los Oficiales Reales y «malquisto con los soldados»; acababa de regresar de su expedi- ción al Paraguay donde saqueó pueblos, y ordenó en unión del escribano Pero Hernández, el alcalde Juan Pavón y un cura, el asesinato á mansalva de los indios en Corpus Cristi; hacía apenas cuatro meses y medio que sus tropas le habían prestado juramento de obediencia en dicho punto, y cuando se preparaba tal vez á ordenar lo hicieran las que había en Buenos Aires, llega casi junto con él la noticia del arribo al Plata de Alonso Cabrera, Veedor de Fundaciones, quien viene en nombre del Rey 4 informarlo del estado de la Colonia; siente la necesidad de ocultar sus maldades, que crean dificultades á la conquista, y quiere aparecer como hom- bre necesario para continuarla. Entonces es que Ruiz Galán habla de la urgente necesidad de viveres, para tener pretesto de enviar un buque al Brasil con alguno que hable á Cabrera en su favor; apresura la construcción de la iglesia consagrada al Espiritu Santo, y luego hace levantar con el escribano Hernández una información en que deja constan- cia de sus trabajos, andanzas y socorros prestados á los otros pue- blos; siembras de maiz, iglesias levantadas por él, etc., al mismo tiempo que se excusa de su atropello al diezmo, acusando á los ofi- ciales reales de ser enemigos de la Iglesia y malos servidores del Rey. Firman como testigos de este documento el infaltable Juan Pavón, tercer secuaz de aquella pandilla mística y cruel, y otro que comulgaria con ellos, Declaran en esta información dos clérigos y un fraile. El clérigo CARDOSO: BUENOS AIRES EN 15306. 390 Carrasco dice que es cura, que está alli desde la fundación; que vió hacer las cuatro iglesias que llevó la corriente; que se deshizo una Nao; que no se le pagan los salarios; se queja de que los Oficiales Reales quieren retener el diezmo de las sementeras, lo que sería muy perjudicial.... El Bachiller Armencía y Fray Isidro, con- firman la anterior declaración, etc.?. Como puede verse, estas declaraciones están de acuerdo con las de Ruiz Galán, hasta en asuntos que no interesaban á la iglesia, pero que favorecen los intereses de la camarilla contra los Oficia- les Reales, tesorero Garcia Benegas y contador Felipe de Cáceres. El único punto en que hay desacuerdo, es justamente el de las islesias: Ruiz Galán dice que «unas se han quemado é otras lle- vado el rio» y Carrasco afirma que «las cuatro fueron llevadas por la corriente». Tal es en resumen el famoso documento de Ruiz Galán; desti- nado á engrandecer sus méritos y persona, acusar á sus adversa- rios, disculpar sus malos actos de gobierno y recomendar la cleri- galla que le rodeaba «que sirven á Dios é cada día dicen misa», sin explicar por qué razones eran mal vistos por los oficiales reales que les negaban «su salario», y «no quisieron proveerles de cosa alguna». Más tarde—cuando sea depuesto Ruiz Galán—Juan de Burgos dará de palos al cura de Buenos Aires, acto que fué pre- miado con el cargo de alguacil de la ciudad. Ruiz Galán fué el único de los gobernadores de aquella época, que se afanó en construir capillas y en dejar constancia de su obra. Los demás poco se ocuparon de la Iglesia, llegando uno de ellos — Martínez de Irala—hasta vender una de las que Ruiz Galán cons- truyó a orillas del Paraguay ?. Hechos de esta naturaleza y otros peores, se repiten con tanta frecuencia en la historia de aquella época, que dejan el convenci- 1 Este párrafo ha sido tomado en extracto de un trabajo histórico del señor Enrique Peña: «El Primer cura párroco de Buenos Aires», en Rev. Eclesiástica, 1901. Lo que se refiere á la «Informacion» es tomado de la parte que publicó el señor Lafone Quevedo en su traducción de Sehmidel. La falta del documento completo no me permite hacer mayores apreciaciones sobre él. Sin embargo, la declaración del cura Carrasco «que vió hacer las cuatro iglesias que llevó la corriente», me confirma en que se ha aumentado intencionalmente el número de ellas, á no ser que Ruiz Galán fuera tan porfiado creyente que poniendo las iglesias en pugna con las mareas, las reedificara cada vez que las arrebataban las aguas, esperando el triunfo de la fe... 2 Mem. de Pero Hernandes—pár. 28.—Compradores: «Cabrera y García Bene- gas». 336 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. miento de la indiferencia con que aquellos hombres miraban la construcción, conservación ó engrandecimiento de su iglesia. Y si tales hechos se han producido en épocas posteriores de relativa tranquilidad, tenemos el derecho de suponer que Mendoza, aque- jado por su terrible enfermedad, y los soldados de Ruiz Galán luchando con los indios, con las fieras y con el hambre, no se han ocupado seguramente en construir iglesias, oir misa y rezar el rosario. En efecto: Herrera ?, refiriéndose á los dos buques, cargados de armas, viveres y artículos de rescate, que Mendoza había orde- nado le fueran remitidos de España para reforzar su expedición y los cuales vinieron con Cabrera, agrega: «Envió asimismo el rey un galeón con Anton López de Aguiar, cargado de armas y munl- ciones para el socorro de aquella gente y titulo de gobernador á Juan de Ayolas, y seis religiosos de la Orden de San Francisco, con ornamentos y recado para celebrar, y porque se entendió que la extrema hambre que aquellos castellanos habían padecido, los había forzado á comer carne humana, y que por temor de ser casti- gados se andaban entre los indios, viviendo como Alarabes, el rey los perdonó y mandó que los recibiesen sin castigarlos por ello, teniéndolo por menor inconveniente, atenta la gran hambre que á ellos los necesitó que pasasen la vida sin oir los Divinos Oficios, ni hacer obras de cristianos». Creo con lo expuesto suficientemente demostrado, que hay exa- geración en lo que se refiere á las ¿iglesias de Ruiz Galán, que fue- ron más tarde reducidas á una por su corifeo, el escribano Pero Hernández, quien dice en el párrafo 4 de su « Memoria» de 1545: «el capitan que don Pedro dejó, fortaleció su Real é con buena diligencia, hizo iglesia é sembró mucho maíz». Esto no quita que Ruiz Galán haya improvisado iglesias en ranchos sobre la playa, cuando fué incendiada la población—como lo he supuesto ante- riormente—pero niego en absoluto que ellas hayan formado parte de la ciudad fundada por Mendoza sobre la meseta, pues en este caso, ésta habría sido también, arrebatada por las aguas. Y no debemos olvidar, que si la previsión humana aconsejaba á Men- doza y los distinguidos capitanes que lo acompañaban, colocar la ciudad en una altura, también se lo prescribían las leyes españolas que habían previsto el caso, pues no siempre se podía contar con hombres de la talla intelectual de estos conquistadores. 1 Década vr, libro 11, capítulo xvi. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 331 Las leyes de Indias no olvidaban ningún detalle sobre posesio- nes y fundaciones de ciudades. La ley 1.? ordenaba que los pue- blos en las costas, serían situados en puntos elevados y fuertes; se cuidara de tener cerca el agua y los materiales necesarios á la edi- ficación; y que las ciudades situadas sobre una ribera, al poniente de un río, debían estar sobre una colima alta, para que el sol diera primero en ella que en el agua (Leil. Lib. IV. Tit. VID. Seguían á ésta, otras muchas prolijas instrucciones y ceremo- niales que se verificaban con todo aparato y solemnidad, dejando constancia de ello en una acta que levantaba el Escribano Real, y si Ruiz Galán pudo hacer una engañosa información en épocas de desastre, Mendoza no se hallaba en igual caso al llegar á una tie- rra hospitalaria y atrayente, debiendo sujetarse á las leyes y orde- nanzas reales que conocia y no podía desobedecer, sin motivo, exponiéndose á la delación de los irritados deudos de Osorio, cuando el mismo terreno le brindaba al cum plimiento de ellas. Este leal proceder de Mendoza, le permitió gobernar hasta su partida á pesar de su enfermedad y contrastes. Ruiz Galán, con hipócrita falsía, quiso hacerse meritorio, pero, descubierta la verdad, fué depuesto y su nombre entregado al olvido. CAPÍTULO IIL ASPECTO DE LA COSTA Y MESETA DE BUENOS AIRES. Hasta hace cuarenta años conservaba Buenos Aires mucho de su aspecto colonial, no solo en la obra de los hombres sino también en la obra de la naturaleza. Prescindiendo de la edificación, que nada interesa al asunto que tratamos, se hallaba todavía en nues- tra ciudad, vestijios evidentes de la antigua conformación del terreno, de los desagues naturales que lo cruzaban, del recorte de sus playas y barrancas, de los bajos, pantanos y lagunas, y hasta de la vegetación que un día, fué dueña y señora de riberas, barran- cas y meseta. La obra del tiempo y más que ella la del hombre, ha modificado en gran manera el terreno colonial de antaño que ocupa la Metró- poli de hoy. Los antiguos arroyos (terceros) han desaparecido y con 338 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. ellos varias lagunas que más adentro había. Las barrancas de la costa han sido peinadas en suave declive para facilicitar la bajada á la antigua ribera; solo pueden verse lo que eran, en la parte Sud de la ciudad, en el Parque Lezama, la Convalecencia y más al Oeste, pero ya perdiendo en importancia por su altura y conformación. Hacia el interior la modificación no es menos notable y se está efectuando á nuestra vista; pero me abstendré de mencionar nada que á ella se refiera, pues solo debo concretarme á la antigua Bue- nos Aires de 1536. La costa no ha sido menos modificada. El Riachuelo ha sido canalizado y rectificado en su curso, quitándole muchas de su innu- merables curvas; la mayor profundidad de su cauce y limpieza de sus orillas, ha activado la corriente favoreciendo la desecación de los bañados del valle, haciendo desaparecer los pajonales, juncos y vegetación ribereña que lo cubrían. Por el frente del río las Obras del Puerto han modificado totalmente la antigua costa des- de el Retiro hasta Barracas, borrando del antiguo Buenos Aires los recortes de la playa y los terrenos inundados que se hallaban á la entrada del Riachuelo. Al Norte las nuevas obras de los Ferro-Ca- rriles hacen desaparecer la ribera desde el Retiro hasta Palermo. Solo queda, como resto de aquella época, la costa que se extiende desde el arroyo Maldonado hacia el Noroeste, aunque haya desa- parecido su monte ribereño del que solo quedan raras muestras, pobres y raquiticas, para recordar la vegetación de aquellos tiempos. Los que deseen conocer, en lo posible, los recortes y conforma- ción de nuestra costa en aquella época y estudiar el antiguo curso del Riachuelo sin las actuales modificaciones, deben recurrir á los mapas topográficos de Don Pedro de Cerviño, de 1814; C. H. Bacle, de 1830; Adolfo Sourdeaux, de algunos años después, y al gran Mapa Topográfico de Buenos Aires, de 1867; hay planos más anti- guos, pero no nos ofrecen un fiel y seguro levantamiento topográ- fico del terreno, ni un relevamiento prolijo de la costa y del Ria- chuelo. Aunque modernos, los mapas que indico nos ofrecen esa garantía, presentándonos la meseta de Buenos Aires tal como era antigua- mente. En cuanto al curso del Riachuelo, éste no ha cambiado mayormente. Trazado sobre un lecho de tosca y arena, desde una antigua época geológica, no ha tenido porque cambiar de cauce y mucho menos hacia la barranca del ángulo Sudeste de la meseta donde las tierras son más resistentes y el manto de tosca, antes CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 339 mencionado, sobresalía del nivel de las aguas del río desde «Casa Amarilla» hasta cerca de la Boca; en caso de correr por encima de dicho manto, no hubiera sido navegable para ningún buque por pequeño que fuera y los barcos de Mendoza no hubieran podido penetrar en el Riachuelo. Son los bancos de barro y arenas del río los que han sufrido modificaciones, y con ellos, las sufrieron los bajíos y canales que los separaban, cambiando los puntos de entrada al Riachuelo y alterando la profundidad de las aguas del rio enfrente á la meseta. Esos bancos, mal dibujados sobre antiguos mapas llenos de errores que carecen de exactitud en los detalles y en el conjunto, han dado lugar á la creencia de que el cauce del Riachuelo ha cambiado de posición y que en 1536 llegaba hasta enfrente de la calle Victoria. La antigua costa de Buenos Aires en 1536, ofrecía dos aspectos distintos á partir del Riachuelo. Al Sur, hasta Cabo Blanco, era «rasa, llana, desabrigada y de malos puertos», descripción muy de acuerdo con su constitución actual de llanura baja y aneganiza. Al Norte, el valle del Riachuelo ofrecía el mismo aspecto hasta el pie de la barranca donde comienza la meseta, cuyos puntos más salien- tes y próximos á sus aguas eran el ángulo Sudeste (Parque Leza- ma) y la lengua de tierra que se halla más al Oeste, conocida por «la Convalecencia». La meseta de Buenos Aires se presentaba de allí al Norte en ondulaciones más ó menos pronunciadas; surcada por tres arroyos ó zanjones que, casi secos la mayor parte del año, se transformaban en torrentes al primer aguacero. Al Sud el «Zan- jón de los Granados» cruzaba el terreno que hoy ocupa la Plaza Constitución y después de recoger las aguas de otro ramal que venía del centro de la meseta, desaguaba en el río á la altura de la calle Independencia. El segundo zanjón ó «tercero», partía de las proximidades de la hoy Plaza del Congreso y desaguaba en el rio por la calle Viamonte donde formaba una gran laguna: sele conocía con el nombre de «Zanjón de Matorras» y tenía un brazo ó ramal que nacía en la Plaza 6 de Junio' y se unía al principal en la anti- 1 Me serviré de los nombres actuales para señalar los puntos precisos ocupa- dos por los arroyos, lagunas y demás accidentes del terreno. Los arroyos de Buenos Aires, como los cinco ríos de Córdoba, recibieron de los conquistadores la designación de: Primero, Segundo etc. El «tercero» de dichos arroyos cruzaba la parte más poblada y trasmitió su nombre á los demás. 340 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. gua Plaza del Temple. Más al Oeste había un tercer zanjón: el «Arroyo Manzo», que recogía el agua de tres lagunas que existían á la altura de las calles Saavedra, Belgrano y Venezuela; de otra más grande, situada más al Oeste, en 24 de Noviembre, las que se unian por un bañado con otras en Anchorena y Corrientes, Ombú y Córdoba, y por dicho arroyo corrían al Norte, pasaban detrás de la Recoleta y desaguaban en el rio enfrente á la calle Ayacucho. Tenía, también, un ramal que nacía al Oeste de la plaza 6 de Junio. Las barrancas que limitaban por el Este con el río, eran altas y empinadas, aumentando su declive en la parte del Norte, al mismo tiempo que ensanchaban la playa. La altura de esas barrancas oscilaba entre doce y veinte metros sobre el nivel del río, siendo los puntos más altos el ángulo Sudeste (Lezama) y la Catedral, y los más bajos, la salida de los arroyos en Independencia, Viamonte, y detrás de la Recoleta. La ribera del Plata presentaba una playa pantanosa hacia el Sud á causa de las tierras movedizas del Riachuelo, pero, á partir del extremo Sudeste de la meseta (Punta Lezama), surgía á flor de agua un grueso manto de tosca que doblando en el ángulo Norte (Retiro) donde formaba una extensa restinga, se corría siguiendo la costa hacia San Isidro. Otro manto igual de tosca, cubria la playa baja del Sudeste desde la punta Lezama hacia la Boca, en el tra- yecto de algunas cuadras, pero, solo formaba ribera frente á la parte Sud de las meseta; lo demás se unia al terreno de ¡juncales del río que formaba la playa anegadiza del Delta del Riachuelo y, fraccionado en islotes ó arrecifes, descendía oblicuamente hasta desaparecer bajo el limo del Riachuelo. El terreno seco del valle del Riachuelo, entre éste y la barranca de Lezama, empezaba en la calle Ministro Brin (antes Santa Tere- sa). Antiguamente el borde del terreno seco del valle, estaba limi- tado por la hoy calle Almirante Brown que seguía el contorno de la parte alta de esa ribera. Este camino, que existe desde la época colonial, señala claramente donde empezaba el terreno transitable, aunque plagado de pantanos; teniendo al frente, sobre el río, la ribera inundada y cubierta de vegetación acuática que se inter- naba en él hasta cerca del banco, que, al Sud del Riachuelo, se unía á las tierras de la Provincia de Buenos Aires; y hacia el interior los terrenos bajos del valle del Riachuelo, no menos inundado y pantanoso y del cual se conservan vestigios importantes enfrente á los andenes de la «Estación Casa Amarilla», donde, á pesar de los siglos transcurridos, los aluviones y la tierra que se le ha he- CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. SAL chado para las vias férreas, se nos presenta como un recuerdo del pasado, siendo para unos el paraje predilecto de Don Pedro de Mendoza y para otros el antiguo lecho del Riachuelo en la misma época. V YN ENS PUNTG FORDA x ZS.GGBRIE A Mapa del río de la Plata. — Levantado por pilotos del Rey. — Dibujado por Bellin, Ingeniero del rey de Francia.—1770. La entrada al cauce del Riachuelo era una sola por entre los dos bancos que se ven en el plano de 1770. Más tarde se cegó esa entra.- da y se formó otra más al Norte corriéndose el banco en esa direc- ción, pero, estas modificaciones del canal, se han efectuado siempre Anar. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xIvV. JuLro 24, 1911. 22 349% MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. sobre el lecho fangoso del rio trabajado por las corrientes y nunca en tierra firme ?. En la parte más alta de ese banco, frente á la Boca, había hace cuarenta años un sauzal y una ramada en que se guardaban los ca- ballos destinados á sirgar los buaues que entraban al Riachuelo. 'Po- daviía existen, frente al malecón exterior, restos de la casilla de se- ñales desde donde se daba aviso de que había suficiente agua en el canal. Las islas que se ven en el Plano Topográfico de 1867, son los sauzales que había en ese paraje, únicos que sobresalian del agua durante las crecientes. Por delante de la meseta corría un largo banco de arena á una profundidad de dos á tres pies. Entre ese banco y la ciudad había una faja de agua de mayor importancia formando un canal ó fon- deadero que fué el verdadero puerto de Buenos Aires en el siglo XVI. A la altura de la calle Venezuela había un paraje profundo aunque pequeño conocido por «El Pozo», donde podían fondear buques mayores entrados durante las crecientes”. —(Véase el plano de 1789, que refleja algo de aquel pasado). Las riberas del Riachuelo, el valle pantanoso del mismo, las barrancas del río y la superficie de la meseta, estaban cubiertas de tierra vegetal, ostentando las tres una vegetación distinta según la naturaleza del terreno y condiciones de la tierra. Siendo esta una parte importante para demostrar lo que intento, me permitiré hablar dos palabras sobre dicha vegetación, tratando de compro- bar mis aserciones con citas de los historiadores de la conquista, señalando las especies por los vestigios que de ellas han quedado, ó por analogía con las que se hallan en terrenos cercanos de la misma naturaleza y del mismo clima. 1 En el plano de 1770, ya empieza á notarse esa desviación. En el de 1789, el Riachuelo corta la barra y señala los dos bancos. (El reducido tamaño de este plano, me obliga á aumentar el ancho de los canales para hacerlos más visibles.) En el de Sidney, de 1856, se nota fácilmente que las arenas y aluviones acumu- lados en la boca del Riachuelo, han formado el «Banco de la Residencia» frente á la ciudad y la «Punta Demarchi» al Sur; y cegando la antigua barra han des- viado en ángulo obtuso el curso del Riachuelo que buscó nueva salida más al Norte. Esta nueva boca, es la que probablemente, llama Trelles, del «Trajinista», (V. el plano de Sidney, pag. 367.) * En la «Argentina» de Ruy Díaz de Guzmán, edición de Angelis, pág. 10, se hace mención de «El Pozo», aurque por error dice «El Paso». Pelliza, en su edi- ción del mismo libro, dice: «Los Pozos», confundiéndolos probablemente con «Ba- lizas interiores» ú refiriéndose á otros que existían en ese canal frente á la ciudad. Schmidel, se refiere indudablemente al que antes he mencionado, el cual se hallaba á «media legua» del Real de Mendoza. CARDOUSO: BUENOS AIRES EN 1536. 343 La vegetación ribereña del Riachuelo estaba compuesta del infaltable «Sauce colorado» (Salix Humboldtiana), de altos bosque- cillos de «Sarandí negro» (Cephalanthus sarandi) y «Blanquillo» (Excoecaria marginata), acompañados de dos Leguminosas: el «Ceibo» (Erythrina crista-galli) y la (Aeschynomene montevidensis), A ) a] on : Xx E BHFNCO ¿IS HLMIH, a = 0 nea NE Es. E 2S MORMAST IS o . | 0 E : => , ¿ AS : ZSLOPEZ(OS 06 pes 0 NP e nn ad : Léas EIN JE Z Ep 2 PA OS ES . Es . — SS 1 A ByeWos FIRES. ? Carta esférica del río de la Plata, levantado de orden del Rey, en 1789. mezclados á gruesas matas de «Penacho blanco» (Cortaderia dioica) y (Eryngium paniculatum). En los parajes poco profundos y bancos de barro que obstruían las aguas, crecían apretados grupos del mal llamado «Junco» (Scirpus riparius), que retenían espesas balsas de «Camalote» (Eichornia azurea, Pontederia cordata y Sagittaria montevideensis). En el valle, entre el Riachuelo y la me- | seta, el terreno inundado estaba cubierto por espesos «juncales» y «pajonales» de «Paja brava» (Scirpus asper) «Cariza» (Panicum 344 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. grumosum) y «Cortadera ó Penacho» (Cortaderia dioica)', altar- nando con apretados grupos de «Duraznillo blanco» (Solanum glau- cum), de la altura de un hombre. En algunos parajes se destacaban extensos «albardones» ó espacios secos, cubiertos de gramíneas, y grandes lagunas pobladas de pescado que llegaban allí dura nte las crecientes y quedaban detenidos entre los carrizales al producirse el descenso del Riachuelo, Estos parajes eran el sitio predilecto de pesca y caza de los indios Querandií, y más tarde su lugar de refu- gio, para ocultarse y preparar una sorpresa ó para defenderse de la caballería española, que no podía maniobrar entre los «barros blancos». Allí «se retiraron» después de las primeras escaramuzas con los conquistadores; más arriba y en el mismo valle dieron el combate de «Matanza», donde pereció Don Diego de Mendoza y otros caballeros y soldados de la expedición conquistadora. La vegetación de las barrancas y orillas de la meseta, ofrecía otro aspecto. Componiase de matorrales enmarañados de «Cala- fate» (Berberis ruscifolia), «Napindá» (Acacia bonariensis) y algu- nas cácteas. Los médanos y arenales desaparecían bajo el follaje de la hermosa «Flor de seda» (Calliandra bicolor), el «Mata ojo» (Lucuma neriifolia) y una Mirtácea: (Eugenia ylaucescens). En lo alto de la barranca formaban bosquecillos varias Leguminosas: el «Espinillo» (Acacia cavenia), el «Porotillo» (Sesbania punicea) y dos «Acacias» (gimosa incana y Cassia corimbosa), acompañados de una Rubiácea (Guettarda uruguen=is), la vigorosa «Sombra del Toro» (Jodina rhombifolia) y una Cordiácea: (Cordia cephalanta). Un tupido velo de enredaderas cubría estas plantas, siendo las más comunes el «Burucuyá» (Passiflora caeruleu), la «Zarza-mora» (Muehlembeckia sagittifolia), el «Tasi» (Morrenia brachystephana), la falsa «Zarzaparrilla» (Herreria montevideensis) y otras que es inútil mencionar. El monte ralo de la meseta, lo componían grupos de «Tala» (Celtis tala), «Algarrobo» (Prosopis campestris), «Espinillo» (Aca- cia cavenia), «Chañar» (Gourliaea decorticans) y «Coronillo ne- gro» (Cytharerylon barbinervis). Sobre las barrancas secas de las quebradas, crecian el «Incienso» (Schinus longifolia) y la «Higuera del monte» (Ficus subtriplinervis); y en parajes más húmedos, hacia el río, formaban bosquecillos el «Canelón» (Rapanea laetevirens), y dos Euforbiáceas: el «Curupi> (Sapium aucuparium) y el «Palo de leche» (Colliguaja brasiliensis). Este monte, poco espeso, de árbo- les desparramados pero grandes, tomaba el aspecto de bosque á * Gynerium argenteum. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 345 la altura de Olivos, pues se conserva tradición de que ha sido «Monte Grande» en la «Punta de San Isidro»!. Esta rápida descripción no comprende—como es de suponer — sino las plantas principales y está de acuerdo con distintas citas históricas de Schmidel, Ruy Díaz, Villalta y otros que actuaron en aquellos tiempos. Las especies que menciono son tomadas de aquellas citas, ó por restos que han quedado de la vegetación de esos tiempos, aumentadas con las especies que hoy existen en las cercanias de Buenos Aires, Islas de Rio Santiago y San Fernando; plantas que he encontrado, lozanas y abundantes, en las islas de Hornos, López y San Gabriel, de la costa Oriental, y en las barran- cas de la misma. No debo terminar esta ligera reseña sin mencionar una planta que ha sido motivo de curiosidad para los que se ocupan de estos estudios. Me refiero á4 los «Kardes» ó Cardos», mencionados por Schmidel y Villalta, cuyas raices servían para mitigar el hambre y la sed de los conquistadores y aun de los indígenas. Como no existian «Cardos» en nuestro pais, pues las especies actuales son importadas, debemos buscar que planta ha recibido ese nombre á causa de su parecido con una europea: ya que sabe- mos era costumbre de los españoles bautizar de esa manera la fauna y flora de las tierras que descubrian. La voz «Kardes», empleada por Schmidel, corresponde á una planta muy conocida en Alemania y España (donde la llaman «Cardencha»). Es un Dipsacus, especie de Escabiosa ó «Viuda», algo espinosa y cuyas cabezuelas, cuando secas, servían antigua- mente para cardar. Hay una planta de este género en nuestro país, aunque no sea muy abundante, y he tenido oportunidad de ver ejemplares muy lozanos en los alrededores de Tandil (Puente de Bilbao, etc.). Es planta importada. El Dr. Carlos Spegazzini-——cuya opinión es de gran valor en este asunto—cree con mucho fundamento, que los «Cardos» menciona- dos, de raices acuosas y comestibles, pertenecen á varias especies de Eringios (Eryngium elegans y E. nudicanle), que existen en la Provincia de Buenos Aires y que lógicamente han crecido en abun- dancia sobre la meseta en que se asentó la ciudad. Las raices de estas plantas, presentan tubérculos dilatados, comestibles y acuo- sos, siendo mayores en la especie elegans. Se les llama vulgar- mente «Zanahorias del campo». ¡Ruy Díaz. Cap. XII, y en la Mensura del Ejido, en 1608. 346 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. CAPÍTULO IV. EL RIACHUELO. Veamos ahora de donde sacaba el señor Madero, que «el cauce del Riachuelo se extendía hasta el frente de la parte Sur de la ciu- dad actual». «Estudiando sobre los mapas levantados á principios del siglo XVII lo que dice Ruy Díaz (cap. x1) se confirma lo que he demos- trado, pues relata que media legua arriba del Riachuelo fundó una población Don Pedro de Mendoza: y tal distancia debe medirse desde la embocadura que entonces tenía frente á la actual calle Alsina, y no hacia el Norte del curso general de sus aguas». Más adelante—en una nota-——agrega: «Poseo copia legalizada de un plano inédito de esa época (?) levantado por Joseph Bermú- dez, sargento mayor de ingenieros de esta plaza; en cuyo plano está dibujada la canaleta de entrada al Riachuelo, con la emboca- dura frente á la actual calle Victoria». No quiero discutir la capacidad de «Joseph Bermúdez, sar- gento mayor de ingenieros de esta plaza», pero quiero, si, discutir la afirmación de que la Boca del Riachuelo haya estado en esa época, «frente ú la calle Victoria ó Alsina», como dice el señor Madero. Esta afirmación contiene dos puntos que no se precisan clara- mente. En el primer caso, hay prolonyación del valle del Ria- chuelo «hasta la mitad del frente Este de la ciudad actual» (opi- nión Madero)'. En el segundo caso, hay una «canaleta» en el cauce del río de la Plata desde la actual Boca del Riachuelo hasta enfrentar la calle Victoria, punto de entrada (plano de Bermúdez). En el primer caso—-si aquella opinión fuera cierta—tendriamos un hecho bien extraño: las playas de nuestra ciudad, en lugar de crecer y extenderse, han sido arrebatadas por las aguas y una 1 La boca ó entrada de un río, arroyo ú otra corriente de agua, se halla siem- pre, como es sabido, entre cabos ó tierras. Si la «embocadura» del Riachuelo, que cita el libro del señor Madero, estaba frente á la calle Victoria, hasta allí llega- ban, por ambas riberas, las tierras del valle del Riachuelo. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 347 superficie de terreno que puede calcularse alrededor de 200 hectá- reas, ha desaparecido sin que Ja tradición nos haya legado ni un recuerdo de tal suceso. Felizmente no tenemos que ir muy lejos para destruir tal idea y en la misma obra del señor Madero encon- tramos, al fin del apéndice, un documento relativo á las mensuras efectuadas del Éjido y chacras de Buenos Aires en 1603, que dice asi: DECLARACION DE LOS RUMBOS DE LAS CHACARAS DEL RIACHUELO. — «En la ciudad de la Trinidad á 16 dias del mes de Diciembre de 16083 años, en presencia de mi el escribano, parecieron los capita- nes Manuel de Frias y Francisco de Salas, Alcaldes ordinarios de esta ciudad, Victor Casco de Mendoza Alferes Real y Anton Higuera de Santa Ana regidores, personas nombradas y diputados por el Cabildo para ver y declarar el rumbo que se ha de tomar en las medidas del Exido, Chacaras y tierras, y dijeron que ellos han visto las Chacaras del Riachuelo de los Navios, que están de la parte de esta ciudad, y han llevado personas que entienden y que con la aguja han hecho la experiencia para ver el rumbo y debajo de juramento que hicieron á Dios y á la cruz declararon, que el rumbo que se ha de tomar y llevar en las medidas de las dichas Chacaras referidas y que se señala, es la tierra adentro de Sueste á Noroeste y por cabezadas de Nordeste á Sudoeste, y la frente la barranca del Riachuelo, y lo firmaron.—Manuel de Frias. —Ante mi Cristoval Ramon, escribano público y cabildo». Este documento prueba dos cosas: 1. Que el Riachuelo no corria lamiendo la barranca (de Lezama), pues cabían chacras entre ambos puntos, colocadas transversalmente á las líneas de esos límites. 2. Que el curso del Riachuelo era de Sudoeste á Nordeste como hoy, y así lo señalan las líneas de las cabeceras, pues la que servía de frente corría á lo largo de la barranca del Riachuelo y la del otro extremo, al pie de la meseta, donde se halla hoy la calle Martín Garcia. Entre las chacras y el límite del éjido, quedaban «sobrantes» de tierra, y la serie de chacras empezaba desde el Río de la Plata, á donde presentaban su costado, arrancando la línea de cabeceras desde las islas del Delta, sirviendo el riacho que separaba á estas de tierra firme, como mojón de ese costado, según lo demuestra el siguiente documento: AUTO Y DECLARACIÓN. —<«Este dia estando en la chacara de Mateo Leal de Ayala, Alguacil Mayor de esta ciudad, donde fueron á medir las chacaras de la vanda del Riachuelo, antes de hacerse parecieron con sus títulos el dicho Alguacil Mayor y Alvaro de 34S MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Mercado, y la parte de Francisco Perez de Burgos, que tienen allí sus chacaras y habiéndola visto por vista de ojos el dicho señor Gobernador, mandó que se fuesen midiendo desde la isla del «Pozo» donde comienza la chacara de Alvaro de Mercado hacia esta ciudad y que esta orden se guarde siempre, y se señaló por mojon la dicha isla y desde ella se midieron y amojonaron las chacaras: y las demás tierras que hubo hasta el Ejido, su señoria la declaró por libre para hacer merced de ella en nombre de su Majestad». Las «personas que entienden», á que se refiere el primero de estos documentcs, son probablemente los agrimensores Francisco Bernal y Martín de Rodríguez que en la misma fecha trazaron y amojonaron el perímetro del éjido, según se desprende del acta levantada el 16 de Diciembre de 1608. Llamo muy especialmente la atención sobre un párrafo que contiene dicha acta de mensura, donde dice: «se puso un mojon en la punta de la zanja de cuadra de Ruy Diaz de Guzman y de alli por los mismos rumbos de las calles (de Este á Oeste) se tomó con el aguja la deresera de la tierra adentro y desde la barranqui- lla que bate el agua del rio, se midió la legua de largo». El punto indicado en las líneas que transcribo era la ribera enfrente á la calle San Juan, y si existía allí el Río de la Plata en 1608, mal podía el Riachuelo ocupar ese paraje en 1536, Para las chacras del otro lado del Riachuelo (al Sur), se ordenó el rumbo invirtiendo las cabeceras en esta forma: «Que las suertes de tierras de la dicha costa de la mar que están de la otra parte del Riachuelo de los Navíos, han de llevar el pro- pio rumbo que está señalado á las que van de esta cindad al Rio de las Conchas, que es de Nordeste á Sudoeste la tierra adentro, y por frente la costa de la mar, y asi lo declaran debajo de Jura- mento y lo firmaron. — Manuel de Frías — Victor Casco de Men- doza. — Ante mi: Christóbal Ramon, escribano público y de cabildo» !, La costa del Río de la Plata, desde La Boca hasta la barranca (de Lezama), corría entonces y hasta hace poco —antes de las obras del Puerto Madero —de Sudeste á Norocste. Es el rumbo que se dió naturalmente á las chacras del Riachuelo «que están á la parte de esta ciudad». A las chacras del «otro lado del Ria- Este documento destruye la hipótesis de que el Riachuelo de los Navíos fuera un ramal ó brazo del Riachuelo actual. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 349 chuelo» (hoy Barracas al Sud), se les dió frente al mar (Río de la Plata), y corrían tierra adentro de Nordeste á Sudoeste, que es el rumbo que tiene el Riachuelo en ese paraje ?. Creo con esto demostrado que el valle del Riachuelo y cauce del mismo, no han llegado hasta «frente á la calle Victoria», y que tanto el curso de sus aguas como las costas del Río de la Plata, no han sufrido alteración muy sensible. En cuanto al valle actual que se extiende entre la barranca de Santa Lucía y el Riachuelo, puedo asegurar que no ha sido cruzado en 1536-41 por ningún Riachuelo ni desagúe profundo y caudaloso. Basta recordar que en esta última fecha fué abandonada Buenos Aires, hasta que Garay la repobló en 1580; y no es posible, que en el corto espacio de 40 años, desapareciera el Riachuelo de ese paraje y se borrara y desecara el terreno hasta el extremo de servir para agricultura. Pasemos, ahora, á la «canaleta» del plano de Bermúdez; lamen- tando que el señor Madero no haya agregado dicho plano á su libro, ya que se trata de la «Historia del Puerto de Buenos Aires», ó por lo menos, indicado algunos detalles al respecto que nos orientaran mejor. Prescindiendo de que, por regla general, los afluentes de un río desaguan en él formando un ángulo agudo en el sentido de su corriente—ó por lo menos un ángulo recto —no puedo admitir que las aguas del Riachuelo que desde varias leguas se deslizan en este sentido, aunque desembocaran bruscamente en ángulo obtuso al Plata, tracen en el lecho de este un canal más profundo, de media legua de extensión, en contra de la corriente del río. Es un principio reconocido que los grandes caudales de agua, antiguos ó modernos, forman en su desembocadura un Delta com- puesto de varios cauces y de islas que se forman con los sedimen- 1 En la «Vista ideal» que acompaña á este trabajo, he tratado de restaurar en lo posible, la meseta y riberas de Buenos Aires en 1536. Para ello me he servido del mejor plano antiguo que conozco, y, de acuerdo con la orientación que esta- blecen los documentos de las mensuras de 1580 y 1608, he trazado los éjidos de la ciudad y chacras, coincidiendo los rumbos de estas, en ambas márgenes del Riachuelo, con las riberas de éste y del río de la Plata, y las del Norte que «van hacia el río de las Conchas», con los rumbos de muchas calles actuales de la ciudad; jalones imborrables que comprueban la existencia de las chacras en esa posición. 350 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. tos arrastrados por las aguas. El Riachuelo no ha escapado á esta ley de la Naturaleza y en su época de caudalosa corriente, formó su delta con arroyos de poca importancia, algunas islas bajas é inundables y bancos de barro y arena, por entre los cuales trazaron su salida las aguas del Riachuelo y una de las corrientes del río que, al deslizarse por delante de la meseta, se incorporó á la otra para doblar hacia el Este internándose en el Plata. La formación de esos bancos no es el resultado de un desmem- bramiento de la costa arrastrada por las aguas, sino el producto de los materiales llevados por la corriente del Riachuelo y depo- sitados en su delta. Ordinariamente la corriente es más débil cerca de la desembo- cadura de los ríos, permitiendo que las aguas se decanten, deposi- tando el limo y materiales que llevan en suspensión. La corriente contraria del Río de la Plata á que antes me he referido, favore- cía esta decantación, impidiendo que esos materiales fueran muy lejos y, quedando depositados allí, mal podía formarse una «cana- leta» ó desagiie del Riachuelo en dirección Sud á Norte en contra de dicha corriente; mientras que uniéndose á ella, al chocar algo oblicuamente buscaban una tercer salida, natural y lógica, y lan- zándose con empuje hacia el oriente trazaban un canal profundo, al paso que formaban á uno y otro lado, dos bancos de muchisima extensión. Por regla general el terreno crece en los deltas de las corrientes de aguas y se levanta en donde estas han sido desalojadas. Asi vemos crecer el delta del Paraná y levantarse el valle del Ria- chuelo. En la teoría que refuto, se piensa de un modo contrario al establecer el Riachuelo frente á la calle Victoria en 1536, admi- tiendo que sus costas han sido arrebatadas por las aguas y su cauce rellenado por las tierras, hasta reducirlo al estado en que hoy se encuentra, treinta cuadras al Sur del supuesto punto de entrada. El deseo de demostrar prácticamente el error del plano de Ber- múdez—según la nota del señor Madero—del cual se desprende una teoría insostenible, me ha conducido á un terreno en que no debo extenderme. Sin embargo, antes de terminar, séame permi- tido como última prueba y como un estudio interesante para los que se dedican á conocer cuanto se relaciona con la geología de CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1596. 351 nuestro país, agregar en extracto un trabajo del Dr. Florentino Ameghino que, maestro eximio en la materia, nos hace conocer con toda claridad la historia geológica del valle del Riachuelo, desde sus primitivas transformaciones hasta su estado actual. El valle del Riachuelo —dice el Dr. Ameghino—era una antigua depresión del terreno pampeano (N.* 1) cubierta por el mar. Al producirse el levantamiento continental, las aguas marinas se reti- raron y las aguas dulces de los ríos y arroyos pampeanos hasta entonces detenidas, corrieron hacia el mar recobrando su antiguo curso, arrastrando en su empuje los sedimentos lacustres pam- peanos que le eran propios y los bancos de conchas marinas (N.? 2) depositadas en isletas y en la costa, que las lluvias y denudaciones de las barrancas arrojaban al cauce. Vino un nuevo abajamiento ó descenso del terreno y el mar volvió á penetrar más profunda- mente en el continente, pues las aguas marinas remontaron el Ria- chuelo hasta Morón, en el Río de las Conchas hasta el Puente de Márquez, y en el Río Luján hasta tres leguas de este pueblo. Y, De 12) (TO EST 'Y A Sy hi SN po e ed NES z PERES, MVE AL GI E Ñ e ZEZE É MAA ÚNPREI AS W Corte trasversal del valle del río de Matanzas á la altura de San Justo. Según el Dr. F'. Ameghino. 1]—Formación Pampeana (piso bonaerense). 2—Banco marino contemporáneo del pampeano lacustre (piso lujanense), Ccon- servado en una ensenada de la antigua barranca. 3—Formación cuaternaria (piso querandino). Estratos de arena y conchilla de 6 á 12 metros de espesor. 4—Cauce del río de la Matanza (Riachuelo). En el Riachuelo los terrenos de este horizonte rellenan toda la cuenca del valle en una extensión de 30 kilómetros por un ancho que varía entre cuatro y quince, con un espesor de cinco á diez metros, formando capas estratificadas de arena y arcilla, mezcla- das de conchas marinas (N.* 3). Son las capas de «Conchillas» que - 352 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. se descubren hacia La Plata, formando parte del terreno «raso, llano y desabrigado», de que habla Ruy Díaz de Guzmán. (Cap. 1x). Se produce un nuevo levantamiento del terreno; lento y progre- sivo; las aguas marinas abandonan el valle y las dulces vuelven á correr trazando sobre aquel inmenso cauce rellenado por el mar, un nuevo cauce, muchisimo más pequeño, sinuoso, pobre, con una anchura de 10 á 40 metros y una profundidad sin importancia: es el Riachuelo actual. (N.* 4). Mientras se forma este cauce, las aguas dulces y las pluviales arrastrando materiales producidos por las denudaciones de las barrancas, limo de vegetación descompuesta y bancos de moluscos de agua dulce, forma una delgada capa que cubre la de arenas marinas; sobre ella se formará una capa de humus cubierta de vegetación lacustre y tendremos el nuevo valle actual !. Este trabajo del Dr. Ameghino, nos permite conocer el origen y formación del valle del Riachuelo, asi como la razón de las sinuo- sidades y caprichosas curvas de su cauce, que no puede ser otra que el ascenso lento y paulatino del terreno y la retirada no menos lenta de las aguas del mar que se desviaban allí donde el suelo ofrecía resistencia. Si esta retirada hubiera sido rápida, la fuerza de la corriente habría trazado un cauce más recto y el Ria- chuelo al deslizarse por el mismo camino de las aguas marinas, no presentaría las curvas cerradisimas que presenta. : Esa lentitud de las aguas del mar ha permitido asimismo que, en ciertos parajes próximos á.la embocadura del Riachuelo, se con- servaran varias isletas del terreno pampeano que apenas afloran arriba del nivel de las aguas. Estas isletas compuestas de tosca muy dura, forman parte del horizonte de que ya he hablado al mencionar la antigua playa del rio; que corre por debajo de la me- seta, y desciende oblicuamente hasta el Riachuelo, siendo visible hasta hace poco tiempo en la parte de ribera comprendida entre «Casa Amarilla» y el arroyo del Piojo. Las isletas y grupos aisla- dos de tosca se hallaban un poco más hacia el Sur, donde aflora- ban apenas fuera del agua y en los cuales el naturalista señor Enrique de Carles encontró hace algunos años, restos de un Sceli- dotherium, fósiles que se hallan hoy en el Museo Nacional. Los bancos de tosca en que se hizo este hallazgo, deben perte- necer seguramente á la parte superior del que corre debajo del río 1 F, AmecninN0 «Contribución al conocimiento de los mamiferos fósiles de la República Argentina». CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1586. 353 y en el cual la draga «Majestic» extrajo desde una profundidad de 24 piés, trozos de tosca de dos toneladas, tan extremadamente dura que sólo podía cortarse á cincel *. Estos bancos de tosca impedían que el Riachuelo se aproximara á la meseta; en cambio podía correrse al Sur, donde el terreno está compuesto de arena y tie- rras blandas. Creo con todo esto demostrada la inexactitud de lo que «dedujo» el señor Madero, apoyándose en una frase ambigua de la informa- ción de Ruiz Galán—que no publica—y en un plano de Joseph Bermúdez — que tampoco reproduce.—Veámos ahora de recons- truir la escena de la primera fundación de Buenos Aires con algu- nos girones históricos tomados de los narradores de aquellos tiem- pos, sin que pretenda con esto decir la última palabra de la ciencia y de la historia en esta materia, cuando ¡justamente se descubren de continuo nuevos documentos que más adelante nos permitirán conocer la verdad, confirmando mis opiniones ó recha- o zando mis teorías ?. CAPÍTULO V. EL PLANO DE BERMÚDEZ. Escrito lo que antecede, llega 4 mis manos un ejemplar de la obra publicada por la Municipalidad de la Capital: «Documentos y planos relativos al periodo edilicio Colonial de la ciudad de Bue- nos Aires.» Recorriendo rápidamente el primer tomo, que se refiere al Fuerte, encuentro algunos datos referentes á los cambios produci- dos en los bancos y canales de la Costa de Buenos Aires, desde 1650 á 1710, y un plano de Be:múdez con el trazado del famoso «cana- lizo de tres pies de profundidad», que usaban de preferencia para entrar al Riachuelo las embarcaciones pequeñas; pero nada rela- tivo á lo que era el puerto en los tiempos de Mendoza y de Garay. En el tomo segundo, hay un nuevo plano de Buenos Aires fir- mado por Bermúdez en 1713, plano que, cotejado con el anterior 1 «La Ingeniería»—15 de Enero de 1907. 2 Véase la parte histórica (1536-41) qne publicaré separadamente. 3b4 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. de 1709, nos presenta Buenos Aires bajo un aspecto panorámico muy distinto, pero que se acerca á la realidad, mientras que en el otro parece transportada á otra tierra, con otra costa, otros relie- ves y otro Riachuelo; dándonos este cotejo la ingrata seguridad, de que Bermúdez, simple oficial de artillería elevado á la categoría de Ingeniero de una pobre plaza en lejana colonia, no sabía sino muy medianamente, medir, calcular y dibujar; sin prolijidad en las proporciones y perspectiva que le hubiera corregido sus cañones de cien pies de largo y esas dos riberas tan distintas en el trans- curso de cuatro años. Haré un extracto rápido de esos documentos, subrayando los puntos principales que toquen las dos teorias en discusión y agre- gando notas que aclaren el punto; y demostraré los errores de Ber- múdez por el examen de sus mismos planos. En cédula Real de 9 de Diciembre de 1644, se ordenó al Virrey del Perú, marqués de Mancera, fortificara de fagina la ciudad de Buenos Aires y fabricara cañones con cobre traido de Chile. En otra Cédula de 16 de Marzo de 1663, se reitera esta orden y agrega la construcción de un fuerte en el paraje llamado San Sebastián (Retiro). Recibe estas órdenes Don José Martínez de Zalazar, Gobernador de Buenos Aires y tanto éste como su sucesor, Don Andrés de Robles, activaron la construcción del «Fuerte» en la Plaza Real y de un fortín ó torre artillada en la Boca del Riachuelo para de- fensa de éste, pero, del fuerte en San Sebastián no hicieron más que delinearlo trazando unos surcos, aún cuando eran partidarios de su construcción. Sucede á estos el Gobernador Don José de Garro, quien con fecha 26 de Febrero de 1680, recibe una Cédula Real ordenándole suspenda la fortificación de fagina de la ciudad y construya un fuerte capaz de defender los «surgideros de los tres pozos que lla- man de la Merced, San Francisco y Santo Domingo, donde surten navios para hacer las cargas y descargas.» El Gobernador Garro reune Junta de Oficiales el 25 de Junio de 1681, y todos opinan por el fuerte en San Sebastián (El Retiro), con excepción del Capitán Don Pedro Pacheco, quien opina por el paraje «nombrado San Pedro (barranca entre San Telmo y Leza- CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 300 ma), por estar más vecino á la ciudad* y al desembarco de los navios que vienen á este puerto y por no poder poner sitio en forma el enemigo por la incomodidad de unos prados que hay entre la, barranca y el Riachuelo, que en lloviendo, son intransitables de poderse mantener en ellos. » El Gobernador Garro dijo: «Se conforma con los pareceres dados en que señalan para la formación de dicha fortaleza el paraje de San Sebastián por ser de más eminencia y desde él se predomine la campaña, la marina, la ciudad y la canal de la punta del banco por donde precisamente han de entrar cualesquier bajeles que vengan á este puerto, además de que desde dicha fortaleza formada en di- cho sitio de San Sebastián se defiende con su Artillería los Pozos y Surgideros de San Francisco, las Mercedes y Santo Domingo, que menciona la Real Cédula» ?. En una Junta reunida en España el 6 de Febrero de 1685, se resuelve, que: «manteniéndose el Fuerte antiguo de la Plaza Ma- yor de Buenos Aires y el Fortín ó torre que hay en la Boca del Riachuelo, por donde la ciudad mira al Sur, será más conveniente proseguir el fuerte de San Sebastián y no fabricar otro en San Pedro porque con el Fuerte de la Plaza y el Fortín del Riachuelo (que estos han de quedar estantes) viene á quedar bastantemente defendido el surgidero de los Pozos y desembarcadero, de las em- barcaciones enemigas que por aquella banda del Sur pudieran in- tentar invasiones contra la ciudad; para lo cual sirviera poco el fuerte hecho en San Pedro, cuyo terreno hacia la marina es un continuo pantano hasta el Riachuelo que impide hechar por allí gente en tierra ?. ; « Que es de mayor importancia el fuerte en San Sebastián, por- que desde allí puede ofender (aunque muy á lo largo) con su arti- llería á los navíos que intentaren entrar por el canalizo que va para los pozos del Río de Plata * más cercanos á la ciudad, lo cual no se pudiera lograr desde el paraje de San Pedro hasta que diesen fondo entre la fortaleza antigua que está en la Plaza de la ciudad y la torre de la Boca del Riachuelo. A lo que se añade, que al paraje de los dichos Pozos no pueden llegar navíos sino muy me- ¡Lo principal de la ciudad se extendía entonces al Sur de la Plaza Mayor. 2 Más adelante veremos que según las medidas de Bermúdez, los cañones no alcanzan á defender dichos parajes. * Esto destruye la hipótesis de la ciudad en el bañado ó en la playa. 1 El antiguo canal de Catalinas, que nacía con 5 metros de profundidad en la Rada Exterior y terminaba en 3 metros en Balizas Interiores, frente al Retiro. 356 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. dianos y estos precisamente han de ir á buscar el Canalizo que empieza por enfrente del fuerte de San Sebastián y al alcance de su artillería. » Después de esta y otras razones, la Junta resuelve: « que el fuerte de San Sebastián se mantenga y prosiga su fábrica en el sitio que está delineado y elegido y no en el de San Pedro. » En 24 de Octubre de 1703, el Gobernador Don Alonso Juan de Valdéz é Inclán, informa al Rey que aún cuando la Junta ha orde- nado el fuerte en el paraje de San Sebastián, habiendo sido « de este parecer cuatro gobernadores sus antecesores », hace uso del derecho que se le concedió de reunir una Junta para variar el sitio de esa construcción —de la que apenas hay vestijios de empezada— y proponer el alto de San Pedro, «desde donde se domina toda la ciudad y se defiende el único desembarcadero ». Adjunta el informe del Ingeniero Don Joseph Bermúdez y las opiniones de los Oficiales consultados. A propósito de éste ingeniero que tuvo el don singular de des- truir el proyecto del fuerte en San Sebastián después de 50 años de gestación, encontramos un papel firmado por el ex gobernador Garro que dice: «hallamos que es bastante capaz la persona del Alféres reformado Don Joseph Bermudez, el cual está examinado del General de Batalla, Don Sebastián Fernandes Medrano, direc- tor de la Academia Real y militar del ejército de los Paises Bajos, á que se añade haberlo yo hecho examinar por un ingeniero que se halla en esta Corte, con la aprobación del mismo Gobernador y por Cédula de S. M. de 25 de Febrero de este año, la aprueba de tal Ingeniero. Y mi parecer es que á este sujeto se le puede seña- lar el sueldo de Capitán de Infantería .» El informe de éste Ingeniero improvisado, dice en extracto: «Que la fortaleza en San Sebastián es inútil, por que desde ella á las primeras casas de la ciudad hay más de 1.400 pies que, con los 1.215 de ésta, *! suman 8,615, distancia que está fuera del alcance del cañón de punto en blanco: «que desde dicha fortaleza á donde fondean los navíos, hay 60.000 pies (3 y */¿ leguas); que no se pue- den ofender las lanchas enemigas que se aproximen á esa costa por que la distancia es de 3.500 pies: fuera del alcance del mosquete y aún del cañón; (!) «que el Pozo de San Sebastián se ha ido cegando y hace 20 años que no se usa, pero que si buques enemigos fondean en él, sería imposible desalojarlos con los cañones de San Sebastián 116 cuadras, el éjido de Garay. Desde 1608 la ciudad tenía 24 cuadras. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 3971 por haber más de 8.100 pies (18 cuadras) de distancia, y no habien- do en esta costa otro paraje más apropósito para el desembarco que el Riachuelo, que es á donde se recojen las embarcaciones que tiene esta ciudad y á donde hay una Guardia, tampoco desde la dicha fortaleza lo podrán estorbar, lo uno por no estar descubierto y lo otro por distar más de una legua»; que no conviniendo demo- ler los grandes edificios de la Plaza Real para ensanchar el Fuerte, el paraje más apropósito es el alto de San Pedro, del otro lado de la ciudad á la cual domina, hallándose á 900 pies de las primeras casas y al Riachuelo 1.100 pies; que al otro extremo de la ciudad hay 8.115 pies, distancia larga para el tiro de cañon; que es más conveniente el lugar de San Pedro por hallarse 500 pies más cerca de la poblacion que el de San Sebastián; que de San Pedro al fon- deadero delos grandes navios hay 58.000 pies, etc., etc., y que por estas razones es de parecer que en ningún paraje queda mejor la fortificación que en el alto de San Pedro. » Don Agustín de Robles, contestando á la consulta, dice: «que el único puerto y desembarcadero que tiene esta ciudad es el Ria- chuelo, que está en la otra parte de esta dicha ciudad, quien media en uno y otro paraje con casi media legua de distancia, y que en dicho Riachuelo hay una fortificacion con una torre en medio, la cual es preciso abandonar desde el primer dia por no poderse de- fender por si sola hallándose tan separada? lo cual no pudiera su- ceder si esta fortificación se hiciera sobre el alto que llaman de San Pedro, por que sobre estar inmediata á la ciudad y descubrirla toda, domina al Riachuelo y ampara á la torre, siendo cierto que el enemigo para atacarla no se ha de meter entre uno y otro paraje y que puede ser socorrida con facilidad y por este medio conservar el Puerto y desembarcadero. » Don Juan de Zamudio, «práctico de este rio», dijo que ha son- deado el Pozo de San Sebastián y que, «ni el dicho Pozo ni su entrada tienen hoy la misma agua que entonces (21 años antes) por haberse ido cerrando con las aguas de arriba»; que halló solo dos y media á tres brazas de profundidad, siendo necesario para entrar una nave mediana crecientes y vientos y alijarse de carga y lastre «lo cual conseguirá mejor, haciéndose las mismas faenas y arrojándose al Riachuelo con una creciente de las regulares, donde 1 Si el canal único de entrada al Riachuelo hubiera pasado frente al Fuerte, no había objeto en mantener aquella torre. Ella defendía la otra entrada, que, aunque oculta por juncos y camalotes, era la principal salida de las aguas del Riachuelo. Axa. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. xiv. Junio 25, 1911. 23 358 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. habiendo una vez entrado, estará más defendido y no á riesgo de quedarse en seco con una menguante de las grandes, como le suce- dería en dicho Pozo»!, El Capitán Urdinza y Arbelais, emite su opinión diciendo: que «no tiene objeto el fuerte en San Sebastián, pues ni defiende la ciudad ni tiene fondeadero que defender, porque el antiguo que ha- bía, hace 20 años se va cegando asi como el canal de entrada cuya boca está á más de tres leguas arriba, tortuosa y baja; que «el único desembarco que tiene éste río para poderse arrimar con embar- caciones menores á tierra en más de dos leguas de la ciudad, es el del Riachuelo que desemboca en el un tiro de mosquete del alto que llaman de San Pedro que está en el remate de la ciudad por la parte del Este; y aunque de difícil entrada por los bancos que tiene su canal en que cada día varan los botes siempre que el Rio baja (sin más regularidad que la de los vientos) y en su creciente regular hoy solo capaz de embarcaciones de poco más de setenta toneladas, esta no solo no puede ser dominado del cañon del fuerte delineado, pero ni de cubierto (por las barrancas intermedias) de ninguno de sus fuegos distantes cerca de una legua y solo podría quedar ase- gurado y cubierto colocándose la fortaleza en el alto de San Pedro.» El Maestre de Campo, Don Esteban de Urizar, dijo: que «siendo el Riachuelo el único desembarcadero que tiene esta ciudad á dis- tancia de media legua, en cuya medianía cae el referido alto de San Pedro, haciéndose en el la fortificación sugetaria á la Ciudad y daría calor á la torre y Guardia del Riachuelo para tenerlo asegu- rado en cualquier acontecimiento, y siendo tambien muy impor- tante para tener descubierta y dominada la campaña que hay entre el Riachuelo y el alto de San Pedro, donde, en caso de necesidad se podría tener reguardada la Caballería y todo género de ganados ». Este informe y pareceres fueron enviados al Rey por el Gober- nador Valdéz Inclán, á fin de que dictaminara lo que más convi- niera. Que la obra costaría 176.000 pesos, y que mientras venía nueva orden trataría de reunir los materiales que fuera posible para no perder tiempo. Como se ve, después de 60 años de porfiar por el fuerte en San Sebastián, se opta por el paraje de San Pedro, mediante la influen- cla del nuevo Grobernador y del Ingeniero Bermúdez. En España *' Esto señala al Riachuelo una profundidad mayor de tres brazas y una entra- da para buques superior al Canal de Catalinas; entrada que no podía ser el «Cana- lizo de tres pies de profundidad», dibujado por Bermúdez. CARDOSO: BUENOS AIRES EN 15936. 399 debió causar extrañeza el cambio y guardaron silencio, hasta que cinco años después, en Enero de 1109, el Gobernador Velasco y Tejada, se dirije al Rey comunicándole que su antecesor Valdéz Inclán, comenzó á reparar el Fuerte viejo y que él continuaría dicha obra» que era suficiente para defender la plaza y el «canal del Riachuelo», adjuntando un informe y plano del ingeniero Bermúdez. Este, olvidando sus manifestaciones anteriores ó comprendiendo la extrañeza que habría causado en España tan brusco cambio de opiniones en pro del Alto de San Pedro y la aterradora cifra de los (16.000 duros, declara en su nuevo informe que no habiéndose hecho dicho Fuerte por falta de recursos, se hace necesario reves- tir y alargar hacia la playa el Fuerte viejo, quedando asi más defendida la entrada al Riachuelo la cual «se va cerrando y en breves años se cerrará que no será capaz de entrar ni salir embar- caciones ni aun muy chicas pues hoy sucede que en estando el río bajo no puede salir un bote vacio» y «siendo lo principal que se debe guardar la entrada del Riachuelo, esta se puede defender muy bien de dicha fortaleza (El Fuerte) como más claramente se verá por la planta referida». Acompaña á este informe el plano en que figura el Fuerte y cn líneas de puntos la parte proyectada en la playa, donde comienza el famoso «Canalizo» de 3 pies de profundidad» que haciendo una curva llega hasta la Boca del Riachuelo: demostración formidable de su nuevo modo de ver la defensa de este punto, haciendo inne- cesario el Fuerte en San Pedro para defender el «Canalizo» ?. Tanto el plano como el informe, fueron seriamente refutados por el ex Gobernador Don Agustín de Robles, quien contestando la consulta que se le hizo sobre este asunto, dijo: Que el Fuerte que se proponia revestir y aumentar, era pequeño y defectuoso, «con baluartes de 16 piés que si se aloja en alguno una pieza no se pue- den poner dos mosqueteros», que está dominado por los edificios vecinos y quelo propuesto por Bermudez de derribarlos en caso de invasión «manifiesta no haber visto muchos ataques, pues á los enemigos para cubrirse les basta las ruinas de las mismas casas»; que el alargamiento del Fuerte sobre la parte baja de la ribera es defectuoso, pues quedaria la mitad del Fuerte á veinte pies de altura sobre la parte proyectada quedando ésta descubierta y enfi- lada por el resto de la barranca; que no hay mejor paraje que el 1 V. el plano de 1709 y compárese con el de 1713. 360 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Alto de San Pedro «porque por un lado domina toda la ciudad y por el otro ampara y defiende el desembarcadero y la torre que hay en él para su defensa, sin que obste la circunstancia de que se va cegando el Riachuelo, porque siendo todo arena, con hacerla mover cuando baja la marea, la misma corriente que la trajo la. volverá á llevar, como se ha hecho otras veces, etc., etc». En Junio de 1713, el Gobernador Barranco y Zapian, da cuenta. al Rey del estado de las obras de reparación del Fuerte; envía un presupuesto de lo que costará la parte baja y agrega: que «el Riachuelo es el único desembarcadero de á pie enjuto que hay en toda la costa de este gran rio», que tiene una Torre distante de la boca de su caja, casi tiro de arcabuz y está arruinada y pide se cons- truya de preferencia «en su punta un pastel capaz de seis ú ocho cañones de á cinco libras de bala», que cruzarian sus fuegos con el Fuerte haciendo imposible el desembarco en la playa que hay en el medio, sobre cuya barranca está edificado lo principal de esta ciudad: San Francisco, Santo Domingo y Hospital del Rey». Y más adelante agrega: «es preciso se mantenga esta fortaleza (El Fuerte) aunque V. M. mande se haga otra en el Alto de San Pedro, que es el paraje más adecuado para ello porque de él se ciñe del todo el Riachuelo y desde luego que las embarcaciones entran en la canal las recibe con su artillería y en el mismo surgidero las puede echar á pique». Parece que por esta época, Bermúdez ya no tenía las mismas ideas de 1709 ó había estudiado mejor el terreno, pues en su nuevo plano de 1713, no figura el «canalizo», ni la barranca oblicua y saliente hacia el río y en cambio reaparece el Riachuelo, más ver- dadero, con su entrada directa al cauce y su vuelta (hoy, de «Ro- cha»); la barranca corre más recta de Norte á Sud, con su ángulo, oblicuo en el Retiro (San Sebastián), y recto en punta Lezama (Hornos de San Pedro), donde hace la curva entrante de Santa Lucía para salir fuertemente hacia el Sud en la Convalecencia. En ambos planos la ciudad tiene un mismo diámetro—con muy pequeña diferencia—á pesar de la distinta escala en las medidas del Fuerte (el doble). La división en manzanas es la del Éjido de Garay (16 cuadras), aun cuando desde la mensura de 1503 la ciu- dad tenía 24 cuadras de frente. La notable diferencia entre ambos planos hechos por una misma, persona con intervalo de cuatro años, no es nada favorable á su autor y merece tomarse en cuenta para saber lo que valen sus tra- bajos. Veamos la parte más saliente de esas diferencias: CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. PLANO DE 1709 Escala de 400 pies, para el Fuerte. No se fijan rumbos á la ciudad. El Fuerte mide 520 pies apro- ximadamente y figura desde Al- sina á Cangallo. Plaza Mayor con tres manza- nas de frente. A los costados del Cabildo hay dos calles que solo existieron en el cerebro de Bermudez, pues colocan San dos cuadras de Ca- , Ignacio á bildo. Los edificios de San Ignacio, San Francisco, Santo Domingo, Catedral y la Merced, están bien ubicados. No así San Juan, que está entre Buen Orden y Lima. El Hospital del Rey ocupa la la manzana Independencia, Chi- le, Defensa y Balcarce. Existe edificio del Convento de Catali- nas. Los «Hornos de San Pedro», é, la altura de la calle San Juan, al N. O. de la Boca. La «Torre ó Fortin» se halla en la Boca del Riachuelo al $. E. de los Hornos. El «Canalizo de tres pies de profundidad» corre entre bancos de arena y barro hasta el pie del 361 PLANO DE 1/13 Escala de S00 pies. Hay rosa de vientos. Mide unos 1250 pies. Desde el centro de Belgrano y Venezuela á Cuyo. Plaza Mayor con dos manza- nas de frente ocupadas por el edificio del Cabildo. Detrás de este hay una calle que resulta precursora de la Avenida de Mayo! Los edificios de la Catedral, la Merced, San Francisco y Santo Domingo, están bien ubicados. San Ignacio ocupa la manzana del Mercado Viejo, y San Juan está entre Tacuari y Buen Or- den. El Hospital se halla una cua- dra más al centro. No hay Con- vento Catalinas. Los Hornos, en la punta Leza- ma, al N. O.dela Boca del Ria- chuelo. La «Torre» está más arriba de «Vuelta de Rocha», al Sud de los Hornos. No existe el «Canalizo» y el Riachuelo se presenta ancho y limpio con rumbo N. E. á6S. O. 362 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Fuerte. La costa desde este | En «Vuelta de Rocha» se enan- hasta la Boca del supuesto Ria- | gosta é inclina al Sud. En la ri- chuelo, es pantanosa. Por delan- | bera derecha hay gran arboleda, te del Fuerte corre un banco de | indicando tierra alta que no es tosca. la Isla del Pozo. La «playa que se inunda», en- | La playa que se inunda, mide tre la barranca y el Rio, mide | 350 4 700 pies, sirviéndome de 150 á 300 pies, según la escala del | la escala del Fuerte destinada á Fuerte cuyo ensanche se ve pro- | medir sus distancias. yectado en línea de puntos so- Las vueltas están marcadas bre dicha playa. claramente, siendo de notar que Las puntas ó vueltas de la ba- | la torre ó «Fortín» que está en rranca, en el Retiro, Lezama y | «Vuelta de Rocha» se halla al Convalecencia, no se hallan se- | Sud de Lezama yal Este de la ñaladas y la costa corre oblicua | Convalecencia, como podría es- por ambos lados á formar un | tarlo hoy. gran saliente hasta el Fuerte. | En presencia de dos planos tan distintos, hechos por un hombre á quien se titula «ingeniero», nos queda el derecho de decir que no conocía su profesión, ó que, procediendo con segunda intención, hizo el primer plano á propósito para favorecer la construcción del fuerte en San Pedro, dibujando una barranca y un «Canalizo» que jamás han existido en esa forma. Prefiero creer lo primero, y que los errores de medidas y dibujo son producto de su poca pre- paración y que su segundo plano de 1713, más exacto y mejor dibujado, es el resultado del estudio, de la práctica y del mejor conocimiento del terreno. Las medidas de Bermudez (en su primer informe), se desmienten entre sí de un modo lastimoso. Según sus cálculos, había de San Sebastián á la ciudad 1.400 pies y agregando, 1.215 de ésta, 900 al alto de San Pedro y 1.100 al Riachuelo, formaban un total de 10.615 pies ó sea 23 1), cuadras desde San Sebastián (Retiro) al Riachuelo, lo que nunca fué verdad, pues el Ejido de 1608, que corría en línea recta desde San Sebastián hasta la calle San Juan, ocupaba esas 24 cuadras, sobrando todavía cuatro cuadras de me- seta; pero, si desde la calle San Juan, medimos y contamos esas cuatro cuadras hasta el borde Sud de la meseta y otras doce cua- dras en el bajo, llegaremos á la «torre del Riachuelo, donde se CARDOSO: BUENOS AIRES EN 15936. 369 recojen las embarcaciones menores», con la «legua de largo» que ingenuamente menciona Bermudez, quien con esta confesión con- tradice sus anteriores medidas y establece la verdadera distancia que existía entre «El Retiro» y el Riachuelo, donde se hallaba «la Torre y desembarcadero de á pie enjuto» de que habla el Grober- nador Barranco y Zapian; punto que hoy llamamos «Vuelta de Rocha» situado «á tiro de arcabuz» de la Boca y primera altura para desembarcar «á pie enjuto» que existía en aquellos extensos bañados que formando ribera al Río de la Plata iban á terminar frente á la meseta. Tampoco brilla, Bermudez, como calculista, en su primer informe. Para construir las murallas, parapetos y rebellines, «trae la tierra de media legua de distancia» (?...) á razón de media vara cúbica por carretada (13 */, pies*), lo que es una ofensa para nuestras carretas coloniales. En seguida dice: «Dándole al foso 120 piés de ancho (40 varas!!) y 20 de profundo, importa trece quentos setecientos ochenta y dos mil seiscientos y cincuenta piés cúbicos (13.782.650,3), y costará el sacar la tierra del foso, 51.684 pesos». Esta tierra representaba siete veces más cantidad que la extral- da á media legua de distancia. ¿Qué pensaba hacer Bermúdez con ella? ¿En qué la empleaba? No lo dice. Al terminar su presupuesto y después de varios descuentos para abaratar el trabajo, dice: «Vendrá á importar el gasto de la obra solamente 582.217 pesos en que ha de tener Usia presente que á todos los cálculos se les debe añadir la tercia parte más de su regu- lacion»,... y con este 33 Y, de precaución llega á la suma de 16.289 pesos. ¡Vaya un modo de calcular! No es mi intención herir la memoria de nuestro primer inge- niero, pero, es necesario estudiar detenidamente sus trabajos para conocer el valor de ellos. Su plano de 1709, es uno de los tantos malos de aquellos tiempos, que carecen de valor alguno por los errores que contienen: y sí he aceptado el plano de Cerviño como bueno, rechazando el de la Audiencia como malo, tengo por medio- ere el dibujado por Bermudez en 1713, y rechazo el de 1409, como pésimo ?, 1 Acompaño un bosquejo de estos planos y, para su mejor estudio, aconsejo marcar con distintos colores, las riberas y barrancas. 364 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Ahora dos palabras acerca de la ciudad, riberas y Riachuelo, en el año 1700. El paraje de San Sebastián era el conocido en 1608. por «El Calvario», y por «El Retiro» en 1695, nombre con que se desig- naba la quinta de don Agustín de Robles. La fortaleza que se intentó hacer allí, se delineó en el ángulo y declive de la barranca, pero tan retirado de ella que era imposible hacer los tiros rasantes á la playa, así como era también imposible dirigirlos con buen resultado sobre la ciudad por impedirlo la loma en que se hallaba la quinta mencionada. Seguía á ésta un gran bajo con bañado y laguna que terminaba en la barranca del río; era el «Zanjón de Matorras», hoy calle Córdoba, donde limitaba el Ejido de Garay. Al otro extremo de la ciudad y á 16 cuadras de allí, encontra- mos el «Zanjón de los Granados» (hoy calle San Lorenzo), y tres cuadras más al Sur, empieza el Alto de San Pedro (Telmo) que culmina en el ángulo Sudeste (Parque Lezama), donde se hallaban ubicados los «Hornos de San Pedro y las Barracas», lugar desti- nado por Bermudez para el Fuerte á fin de que las barrancas del Sud y del Este no impidieran el tiro sobre el bajo, como sucedía con el delineado en San Sebastián: defecto que él señala por repe- tidas veces. Seguía luego el bajo hasta el Riachuelo, en cuya vuelta (de Rocha) se levantaba, enfilando las aguas con sus cañones, la 'Porre y Guardia que defendía la entrada del Riachuelo. Esta era la línea más extensa de la ciudad en rumbo Norte á Sud, siendo la parte más edificada la que rodeaba la Plaza Mayor y Conventos de San Francisco y Santo Domingo. Pasemos al río. Al Norte, en la Rada Exterior, habia un canal (el de Catalinas) que en línea irregular y tortuosa llegaba á Balizas Interiores y de allí al Pozo de San Sebastián, al N. E. del Retiro; sitio que está señalado en las cartas inglesas de Sidney. Este canal doblaba allí y siguiendo la costa, pero algo lejos de ella, pasaba por de- lante de la ciudad en la forma que he señalado en el Capitulo 11, hasta unir sus aguas con las del Riachuelo y salir juntas hacia el Este. En el centro de este canal, se hallaban los Pozos de La Mer- ced, San Francisco y Santo Domingo, siendo este último probable- mente, el que Schmidel señala á media legua del Real de Mendoza. La existencia de la corriente de agua que labró ese canal debe ser muy antiguo y su caudal y profundidad muy sensibles, pues si en 1703 declara don José de Zamudio, «práctico de este rio», que cegaba con sus arenas «arrastradas por las aguas de arriba» el Pozo de San Sebastián, en las cartas inglesas figura con una y dos ¿e DI caos ms NA SADO O A A O A A AS LÍNEAS PRINCIPALES | DE LOS PLAMOS DE BERMUDEZ SUPERPUESTOS ¡ | LEYENDA | | Puntiliado y números romanos — Plano de 1709. Rayado y números arábigos — Plano de 1713. ñ 1 (1) El Riachuelo, 2 (1) Torre y Fortín. 3 (11) Hornos de San Pedro. 4 (1v) Barrancas. 5 (v) El Retiro. 6 (vi) Ribera del río, UA Lal CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. 365 brazas de profundidad, y en la de Robiquet (1861) con dos y tres metros haciéndose sentir hoy mismo su corriente en los diques, á pesar del malecón del Norte. Nunca la débil corriente del Ria- chuelo, ha podido contrarestar la pujanza de esa enorme masa de aguas. En la Boca del Riachuelo existia—como en todos los casos seme- jantes—un Delta compuesto de bancos ó islas bajas y canales más ó menos limpios de vegetación palustre. Ese Delta ha empezado á la altura de la calle Santa Teresa (Ministro Brin), donde comienza la parte más elevada de esa costa, y los canales al irse cegando con plantas acuáticas y aluviones han ido uniendo las islas á la costa, ensanchando la playa hacia el río. Asi se cegó el arroyo que sepa- raba de tierra firme la isla del Pozo, señalada en el plano de la Audiencia y más tarde el Arroyo del Piojo, que hasta hace muy pocos años ha existido en esos parajes. (Tal vez el pintorezco nombre que le dieron los lancheros, se deriva del otro). Estos arro- yos Ó canales de aguas semi-estancadas, movidas sólo por las ma- reas, unían á veces el río con el Riachuelo y otras—las más comu- nes—eran ramificaciones de este último. Cuando estos arroyos unian el Riachuelo con el rio, empezaban á cegarse por el lado de este último, como sucedió al «Arroyo del Pozo» y más tarde al del «Piojo» que cerrado del lado del Plata, continuó abierto hacia el Riachuelo sirviendo por mucho tiempo de puerto de cabotaje; lo que prueba tres cosas: 1. Que la corriente del río que venía del Norte al tropezar con la curva de la costa arrojaba sobre ellas las arenas que traía en suspensión cegando los arroyos que carecian de corriente propia para contra- restarla. 2. Que las aguas del Riachuelo no salían por esos arro- yos, desalojando esas arenas y limpiando los canales en la baja marea. 3. Que no desaguando el Riachuelo por allí, tenía lógica- mente otra salida, aunque fuese menos profunda que su cauce y estuviera cubierta de «Junco» formando barra. No debe extrañar esto último que es caso muy frecuente en los. rios, cuando al salirsus aguas encuentran una corriente opuesta ó eruzada. La Ensenada de Barragán, «Puerto de las antiguas fraga- tas del Rey», según Azara, tiene un cauce profundísimo que corre de Sur á Norte, y al salir en contra de las aguas del Plata—de poca corriente allí —se unen á ella y doblando al Este, como las del Ria- chuelo, se internan en el estuario. El choque de ambas corrientes hace depositar los aluviones y arenas en suspensión formando una barra á la entrada, pero trazan más allá un canal profundo que señala su paso. 366 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. El arroyo que separaba la isla del Pozo, se llenaba por ambas bocas durante las altas mareas y, cuando estas bajaban, las aguas descendían saliendo por el mismo camino. Las que desaguaban del lado del río, encontraban corriente contraria y doblaban imedia- tamente al Este buscando el canal profundo y al hacerlo, trazaban sobre el banco de barro y arena blanda una ligera de presión que en cierta época del año se hacia más sensible á causa de la mayor salida del agua. Este camino sobre las arenas, era probablemente el «Canalizo de tres pies de profundidad» señalado por Bermudez, canalizo en que varaban «los botes vacios» y que solo era utiliza- ble durante las fuertes crecientes para buques pequeñ os «menores de setenta toneladas», pero que las autoridades se empeñaban en conservar para la comodidad del desembarco de su escaso comercio maritimo. | No debe olvidarse que Buenos Aires, privado en aquella época del comercio exterior por Ordenanza Real, no tenía gran necesl- dad de un puerto cómodo y espacioso, razón por la cual se conser- vaban los surgideros de los «Pozos» frente á la Ciudad y sólo pre- ocupaba á los Gobernadores la idea de la entrada de una escuadra enemiga y eldesembarco de tropas invasoras: entrada y desem- barco que, como lo suponían todos, sólo podia efectuarse en el Riachuelo; pero, si el Canal de Catalinas se había cegado y el «Canalizo de Bermudez» no admitía buques ni siquiera medianos, ¿por dónde entraba el enemigo al Riachuelo? Y si este no tenia más entrada que el famoso Canalizo, defendido por el Fuerte y bajo el cañón de las baterías que podían improvisarse rápidamente á lo largo de la barranca, ¿por qué defender la Boca del Riachuelo? ¿por qué la Torre artillada? ¿por qué la batería «capaz de conte- ner seis ú ocho cañones» que pedía como urgente el Gobernador Barranco y Zaplan? No. La entrada al verdadero Riachuelo de los Navios—al Ria- chuelo actual —ha estado donde siempre estuvo: con su salida al oriente, buscando la canal profunda incorporada á la gran co- rriente del Norte; con su barra de arenas y limo, cubierta de jun- cales dejados crecer intencionalmente por los Gobiernos de la Colonia y através de los cuales supo encontrar entrada para sus buques, Don Pedro de Mendoza, en 1536. El Riachnelo en aquellos tiempos, con menos profundidad en su cauce que actualmente por la canalización y movimiento de buques, tenía en cambio, más caudal propio. Las grandes lagunas de pesca de los Querandies, eran verdaderos lagos de agua dulce, ES Rade _, Y , 54 Lo) 4 ? mn y > 0 y nr 2 s a Y A Y y Alp, Q, Y A Fo e Je 1 UTA de, 0 r py ro e . 1 Z, ¡Inlerieure , A d Ñ FM Ny AS. ( w» z 1 4 - MS E 2 1 NS ' A 1 2 : : Ha E » d 0 s ee MI -) ¡ ,s a— Merred Sn a s 2 Y) Ccarhecoral 0 E 2 BUENOS AYRE Epave y >] Ma 8 ' S SN Sm % = .* 8 z S LN y » ' z > e ne a e rt » ñ = 3 s > % Y un — RADA DE BUENOS AIRES — por el Teniente Sidney, de la Armada inglesa — 1856. Sondaje en metros. 368 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. sólo comparables con las actuales grandes lagunas de la Provincia de Buenos Aires; los arroyos que convergían al Riachuelo y el extenso bañado que le servía de valle, eran afluentes que lo man- tenian con un caudal abundante, y esta masa respetable de aguas al buscar salida al mar, no podía contentarse con el arroyo del Pozo, angosto y tortuoso, ni con el canalizo de tres pies de pro- fundidad. Tampoco es presumible que el Riachuelo, violando una ley natural, estrechara su cauce allí donde justamente las tierras son más blandas, en oposición á todos los cursos de agua que al labrar su salida, la ensanchan y profundizan hasta formar estua- rio, grande ó pequeño, con Delta ó sin él. En resumen: sostengo que el Riachuelo ha tenido siempre una salida directa al río, hasta la Boca actual: que el canal que inter- naba sus aguas en el estuario, ha cambiado varias veces de lugar á causa de los bancos que se formaban en la barra, pero siempre la corriente se dirigió hacia el Este y nunca hasta el frente de la ciudad: que antiguamente las aguas salian más rectamente á Oriente, hasta que se formó el ángulo de tierra conocido por «punta ó isla Demarchi» (véase plano de 1856) que torció el canal á la izquierda, señalado por los restos de la antigua casilla que cito en el Capitulo 11; que los españoles han conocido perfecta- mente el canal del Riachuelo, que no usaban ni cuidaban por no necesitarlo su escaso comercio, pero que lo tenían en cuenta para el caso de una invasión extranjera: que, en cambio, para entrar al Riachuelo, usaban de preferencia el canal Norte que pasaba por frente á la ciudad, salvando así con más facilidad la barra que unía los bancos (V. plano de 1789), y para sus botes y buques de re- mo, se servían del Arroyo del Pozo al que tenían acceso mediante un «Canalizo» semi-artificial de tres pies de profundidad, cuyo fondo removían cuando lo cegaban las arenas, no siendo navegable para buques de mayor calado sino en caso de creciente de importancia: que este Canalizo nacía en el Arroyo del Pozo y se dirigía al Este para incorporarse á la corriente que venía del Norte, pero nunca en la forma señalada por Bermudez; que esta entrada indirecta y po- brísima, es la que ha dado lugar al error de creer era la única del Riachuelo, cuando solo servia para botes de escaso calado, como lo indican las dos falúas que se ven dibujadas en el plano de Ber- mudez, de 1713. CONCLUSIÓN. El objeto principal de este bosquejo histórico, es la comproba- ción de que la ciudad de Buenos Aires, fundada en 1536 por Don Pedro de Mendoza y «donde él asentó definitivamente su Real», no fué en los terrenos bajos del Riachuelo sino en la meseta ó parte alta, frente al Río de la Plata, edificando allí su Fuerte ó Ciuda- dela rodeado por las demás construcciones que, incendiadas por los indios, fueron más tarde reconstruidas dentro del recinto for- tificado. Apoyo esta creencia en las siguientes consideraciones: 1.2 Capacidad intelectual de los conquistadores, guerreros y ma- rinos de noble alcurnia, nacidos y criados en ciudades y puertos de mar y conocedores de los efectos de las mareas y crecientes de los rios. Todos los historiadores están contestes en que los hom- bres de la expedición de Mendoza, fueron de lo más capaz, distin- guido é ilustre, entre los conquistadores de Indias. 2.” Elección del terreno por «personas inteligentes», enviadas con ese objeto por Mendoza, empleando en dicho estudio un mass, más ó menos. 3.” Mendoza, gentilhombre de cámara del emperador Carlos V debía conocer mejor que nadie las ideas de éste á propósito de fun- daciones. Desde 1523, estas ideas traducidas en Ordenanzas Rea- les decían en extracto: « En la costa de la Mar, sea el sitio levan- tado, sano y fuerte.—No elijan sitios para poblar en lugares muy altos por la molestia de los vientos y dificultades del servicio y acarreo, ni en lugares muy baxos, porque suelen ser enfermos, fundense en los medianamente levantados, que gocen descubiertos los vientos del Norte y Mediodía, haciendo observacion de lo que mas convenga á la salud y accidentes que se puedan ofrecer; y en caso de edificar á la ribera de algun Rio, dispongan la poblacion de forma que saliendo el Sol, dé primero en el pueblo que en el agua». 4.” «Del Riachuelo media legua arriba», dice Ruy Díaz. Es la distancia que hay entre la Boca del Riachuelo y la meseta, frente al rio. «Al Sud como á una milla», dice el mismo, refiriéndose á la 370 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. ciudad de Garay, que ya en 1612 llegaba hasta la calle San Juan, y, aunque la distancia no se establece esta vez de un modo tan ca- tegórico, siempre resultarían quince cuadras entre dicha calle y el Riachuelo; lo que señalaria para el Real de Mendoza, la calle de Chile. Teniendo en cuenta las distancias indicadas por Ruy Díaz, creo que Mendoza levantó su Real sobre la parte más baja de la meseta, en el ángulo que formaba la barranca y el «Zanjon de los Grana- dos» (calle San Lorenzo); quedando asi defendido por el Sur, con la ventaja del fácil acceso desde la playa; entrada de los botes al « Zanjon », en alta marea y demás condiciones establecidas en el párrafo 3.*. 5.2 Mendoza, al establecerse «á la entrada de su conquista», nece- sitaba «un puerto» donde entraran buques de «mar afuera» y para esto no servía el Riachuelo, que fué siempre fondeadero secundario para buques menores. Poreso, cuando los documentos é historiadores mencionan el «Puerto de Buenos Aires», se refieren al rio de la Plata como lo hace Ruiz Galán al firmar su carta-po- der á bordo de la nao «Trinidad», varada frente á la meseta. El Riachuelo no fué nunca puerto principal, y los buques grandes y fragatas del rey, cuando no fondeaban en «Los Pozos», lo hacian en la «Ensenada de Barragan», hasta que se fundó Montevideo. (Viases de Azara—Tomo 1.) 6.2 NiSchmidel, ni los conquistadores que han dejado relatos ó documentos, mencionan para nada el Riachuelo: tan sólo Ruy Diaz, que escribió después, lo recuerda para decir que la ciudad se fundó «de él media legua arriba». Esto revela la escasisima importancia del Riachuelo, pues de haberla tenido, seguramente se hicieran referencias de él. La tendencia á formarse núcleos de población en los puntos de mayor movimiento maritimo, se habría hecho sentir; la población no habría dejado de efectuarse y hu- biera obligado á los historiadores á tenerla en cuenta, pero, el Riachuelo de los tiempos de Mendoza, como en los de Garay y mu- cho después, no fué, 4 causa de su escasa importancia y del bañado que lo rodeaba, sino un punto muy secundario é inhabitable. 1.2 Las láminas de los Capitulos IX y XI del «Viaje de Schmidel», edición de Levino Hulsio, tomadas fielmente de un manuscrito y probablemente inspiradas por el mismo Schmidel, se ajustan admirablemente á lo que he señalado en los párrafos 4 y 5, teniendo la primera de ellas la particularidad de llevar una inscripción tan sugestiva que es casi una prueba de loque vengo CARDOSO: BUENOS AIRES EN 1536. an sosteniendo: sobre las aguas de! rio que corre frente á la Ciuda- dela de Mendoza, dice: «Rio della Plata (!) oder Paraná». La otra lámina reproduce el mismo paisaje pero en perspectiva más ale- jada, para dar más amplitud al río y poder representar en él los cuatro buques incendiados por los indios y los tres mayores (de dos y tres palos), que nunca entraron al Riachuelo, haciendo fue- go con sus cañones. Enambas láminas se ve el terreno accidenta- do de la meseta, con sus árboles desparramados (que no son sauces, ni ceibos) y su fuerte pentagonal defendido por cañones de cam- paña. Arriba de ambas láminas, la leyenda: «Bonas Aeres». No hay Jglesia, ni se ve población afuera del recinto, porque ya habian sido quemada por los indios en los primeros días del sitio. No hay árboles en la orilla del agua. 8.2 Descubrimiento de un verso y un falconete con restos de la quilla de un buque del siglo XVl, en la excavación del dique n* 1 de las obras del puerto de Buenos Aires, en el año 1888, Esta pequeña artillería no puede haber pertenecido á ningún buque naufragado tan cerca de la ribera y en aguas poco profun- das, porque hubiera quedado afuera del agua toda la parte supe- rior, permitiendo salvar los objetos allí depositados y especialmen- te los cañones que iban colocados en los castilletes de proa y popa á gran elevación sobre el agua. Se trata por lo tanto, de un buque incendiado, del que no ha sido posible salvar la artilleria—cosa de gran valor en aquella época y parajes—y del cual sólo escapó á las llamas la parte sumergida. Schmidel refiere que los indios quemaron cuatro buques españoles el día de San Juan, pero que éstos «no tenian cañones». Creo que no tendrian verdaderos caño- nes (lombardas de batería, provistas de ruedas), pero si habrian quedado á bordo los pequeños versos y falconetes, de poco calibre, que iban sujetos á las bordas por un perno de hierro que les per- mitía girar en todo sentido; por lo que, durante el incendio, fué imposible retirarlos prontamente y se hundieron con los restos del buque, perdiéndose entre el barro y las arenas movedizas. 9.0 Según la mensura del éjido de 1608, la línea del costado Sur se empezó á medir desde la barranquilla que bate el agua del río. Esta línea corría por la hoy calle San Juan, enfrente justamente á los restos que acabo de mencionar; lo que prueba que allí existía el río de la Plata con su canal costero que venía del Norte y pasa- ba á 1.000 metros de la meseta y, por lo tanto, al oriente de la isla del Pozo. 10. Según el relato de historiadores de aquella época, el recinto 372 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. del Real fué robustecido con una empalizada del lado más ame- nazado, la cual se empezó á construir después del combate de Ma- tanza, cuando Mendoza se apercibió de que iba áser sitiado por los indios. Esta empalizada no fué hecha á orillas del Riachuelo, pues habría dejado vestigios visibles de ella en un paraje que hasta hace pocos años, estaba deshabitado. La única madera que allí había era de sauce y ésta, aprovechando el terreno húmedo del bajo y la estación favorable, habría brotado, formando una arboleda de aspecto típico casi imborrable. 11.2 En aquella época no había más arboledas que el monte ralo de la meseta y los sauzales de las riberas del Riachuelo. En el va- lle no existían árboles, porque nunca los hay en terrenos bajos de esta clase, limitados por ríos ó arroyos; ó están allí con las raices en el agua, ó sobre las altas barrancas y mesetas de tierra seca y resistente. La aventura que cuenta el ballestero Garcia, cuando esperó al tigre tras de un árbol próximo á la empalizada, sólo pudo producirse sobre la meseta, pues ya hemos demostrado que en el valle no había árboles. Tampoco pudo ser sobre el Riachuelo, pues los tigres y pumas que mencionan García, Irala y otros, no venian del agua sino del campo y atacaban la población de ese lado que era el protegido por la empalizada, siguiendo un rastro ó senda ya acostumbrado, en el cual se puso al acecho el ballestero. 12. Según Ruy Díaz, cuando los guerreros Querandis «sintieron á los españoles, vinieron á darles algunos arrebatos por impedir- les su poblacion, y no pudiendo estorbarles se retiraron sobre el Riachuelo». Es evidente que los indios no se habrian retirado al bajo, si los españoles ocupaban el Riachuelo, «de donde (los indios) salieron un dia—agrega Ruy Diaz—y mataron como diez españo- les que estaban haciendo carbon y leña». Si unos y otros ocupaban el Riachuelo, no tenían los indios por qué salir de él para atacar á los españoles. Es por tanto, evidento, que después de los primeros ataques al fuerte se retiraron de la meseta á buscar refugio «sobre el Riachuelo», en cuyos juncales se ocultaron y, «salieron del Riachuelo» para sorprender á los españoles que estaban en el monte de la meseta cortando maderas fuertes, necesarias para hacer buen carbón; maderas que en el valle no había. No es posible retirarse del Riachuelo «sobre el Riachuelo»; ni «salir del Riachuelo», para atacar el Riachuelo. "VISTA ¡DBEA." e BUENOS AÍRES. <= | as ra 1536. coN LAS MENSURAS | | Or rn Pi DE 1580,1608 REFERENCIAS 1 Real de Mendoza? 2 Antiguo Cementerio (15362). 3 Fuerte de Garay (1580). 4 Punto que corresponde á la Plaza Lorea, sponde áú la Plaza 6 de Junio. 5 Punto que cor 6 Calvario de N. —-—- Éjido de Garay. ——-— Éjido de 1608. Lineas de comprobación de los rumbos de la ciudad y chacras (Mensura de 1605). 3. San Sebastián. VARIACIÓN DEL ÍNDICE CEFÁLICO SEGÚN EL SEXO Y LA EDAD POR VICTOR MERCANTE, Director de la Sección Pedagógica de la Universidad de La Plata. La Sección Pedagógica de la Universidad de La Plata, encar- gada de formar profesores de enseñanza para los Colegios Nacio- nales y de Pedagogía para las Escuelas Normales, entiende que los métodos no pueden alcanzar todo el éxito que de ellos es presumi- ble, sin el estudio científico del alumno. De aquí que el Dr. Joaquín V. González al organizarla, comprendiera en su plan de estudios este primer grupo de materias: Sistema Nervioso, Antropología, Psicología Experimental, Psicología Anormal y Psicología Gene- ral, todas tendientes á hacernos conocer, como terreno cultivable, al sujeto. Estas asignaturas dictadas por conspicuos profesores, son de- sarrolladas á base de largas y detenidas investigaciones para cono- cer el elemento, disponiendo para realizar este propósito, de un abundante instrumental y de los alumnos del Colegio Nacional, del Colegio Secundario de Señoritas, de la Escuela Normal, y de la Escuela Graduada de Varones Anexa á la Universidad, un total de 2.200 sujetos, mitad varones, mitad mujeres, desde 6 años hasta 22, distribuidos en cursos, conforme ásu preparación. Entre las muchas investigaciones realizadas en el instituto á mi cargo para contribuir al estudio del niño, está la de la variación delos Índices Cefálicos según la edad y los sexos, hecha personalmente, con dos de mis ayudantes y que, por supuesto, llega á conclusiones intere- santísimas, de orden no sólo didáctico, sí que también antropo- lógico, en razón del lugar en que fueron hechas, los sujetos censa- dos y de ser esta estadistica, única en nuestro país. ANAL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, Tr. x1v. Acosto 22, 1911. 24 NA! MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. ÍNDICE CEFÁLICO. Las estadisticas que en dos cuadros publicamos á continuación, indican en los 1.201 sujetos, ausencia de índices cefálicos extremos, (hiperdolicocéfalos y ultrabraquicéfalos) y una suma insignificante de dolicocéfalos, 45 por 1.000 en el sexo femenino, 69 por 1.000 en el masculiro. En cambio, dominio absoluto del tipo mesaticéfalo y braquicéfalo, con un pequeño porcentaje de hiperbraquicéfalos. > F e VARIACIÓN DEL ÍNDICE CEFÁLICO. 3 , MERCANTE 'SApepa SRUISp Se] tudo] vusitr ey ue 'soUe ( O110D PASPISUOO AS 'SASAUI Y Á SOUB A Y sos90M>), La ; I : l Ur 6 l ( UB 6 Y ¿48 Ñ Ñ = = = — 1eg — SE | OPE TES c+ Il - - — =— 7 = | 1 — Ze — = G 9€T 09T 6PT C8T OT — e G 7 == — 9 EST TOT OST OST cz - 8 al OT —= — 2 zer cor ga TGI 67 = T OT TI F 5 8 2€T Z9T ZST 68T ve — p cr eT va = 6 TeT 89T OCT z6T TE a | TG ¿TY T 5 OT CET cor 8ST c6T v — g | 87 ST — — TI cet 607 GET 661 eS Cc 8€ 28 | Cc — ar JET 321 09T 10% es - 9 67 di GQ T gr LT J02 TOT 10% Cl = G 7 dy 2 = Pr TP G2T 261 ar 28 — T | PE 6b e = er OPT ZST 091 cod 19 — 7 | 9T 9€ L E 91 aPI OST cer 607 gp — I ar 67 T — Al = = 5 $ al =— | T | 3 P G = SI = = e = OT - An | q P T = 61 a E ES = 8 S | Fl | r 9 T e 06 Jl : tr EAS E A A HS ch 1008 06 ? TO'C8 ES P 1008 Ya N'L'd | dv al IS a cotÉteo E 08 Y TO'SL | 22 Y 1002 Esos E SOUL | — SOUUXPN E |-mberqeayy -Mmberquodig -gomberg A a -popaadiq| * (SHNOUVA) “VXUNV VavadvauD VIAADSA A "IVNOIOVN OIDHATOO (NENASHA) SET V AH HOd SODITY AMO SHOIANT MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. 3716 e == + 6re SS vb 68% = = E a = = JE TET Get SpT ZST TE = 8 OT TEL €91 9HT Z8T 157 = — TG GT vor Ger €sT eb => e TG 7El 991 OST 28T 57 — G cz TET 99T OST 98T 98 = € 2 Cc6lT TOT TST T6! o0v + OT 1074 €8l €9T ser DoT 0S => v yT vET 291 Ger eoT OS —= z 8d 0€T 291 EeT G61 1657 q 6 er L8T 021 €sT 96T ás > ra 21 SeT GT €ST L6T 88 == T El €8T eLT € 7 er VET 102 TGT T6T 76 E I el | GET 821 Per 961 07 — I 8 | = — = G = I ; a =— — T — == — E — — T — pen as = | = E 1 = == 1 % ' | won cala vwvainmnacalaval | 26*1006 | 06 Y 108 | » » o rt o ari EE 152 MS DTIA A t 180.8 ES UM IO O SC Et 150.6 13 » A E A A A NO 150 177 E NA A A a 177 MA DAA Ads A ese 175.4 10 >» O A e OO ANI E 175.5 ES O SS SO 1729 8 » A RA TAS A RE 173 D. T. M.—Promedios.—A cada alumno varón de: (Banos corresponder eo iia aaa 149 o E DA At a Ste taras 145.8 16 » » A A A O OOO ROCA 149 15 » O A SSA 149 14 » A 116.8 350 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. ISHamos corresponde me oe 146.2 12 >» O A O A OS o SADO 146.5 E e a UN 144.5 10 » O TA AO. CTO. IIA 143.4 Os a A AAA AAA A 1AB:9 8 » A 143 il SEO ARAS 140 Mujeres: ¡STAMOSACOLTESPONAS HA e O 145 a NA IERAES EAS 145 16 » Y A E 145.9 AA A OA AS AI 145 14 » JA RS A Cr Ea 144.7 A TA A od 143.8 A A A O O A So 143.8 VERA O 141 NA ED ASES: SEA IRAN 142 9 » A A 140 8» A A iO: 139 TO, E El diagrama siguiente se presta á la comparación : 381 , EFALICO. a 9) , CIÓN DEL ÍNDICE ( ANTE: VARIA al z MERC D. A. P. y T. — COMPARACIÓN POR EDADES Y SEXOS Ea > 1 ll li tl a pr 1 o e I ] t s h . , . 4 y ¡ , , I Ú , ' ! 1 E : A do e dE Ao cch EA A o d z AA yla Ma MERA 2 A ¡EN A E mA od 2 co. « — de a A O e dl -.d Pi == dE La. : Pda A A A ANS € AD á 5 Yue ape re Ao E E A | Eje Moor Aloe A ds o O ME A: IN o A A o o A E LE Ml e Le 4 ; > ó ' $ ' ¡ |] ' ' " A : ' í i ' 7 - 7 A | A A E ES + A SS Y 4 CA o o e IA : REE : A A dp CS A A E a A i el : ¡UA / A : " . ' Ñ I ' I t 4 y poro Ae O SS : hop : ¡ 1 ' í ¡ . : í 1 z I ' ¡ 1 1 ' | ñ , E | y A —-1- z a ri a sr ñ | n= iS A eS A A Ea AN OO A e ¡ ed Oo EA a o ' Y, Í ' 0 , , E : $ , Ñ . ' 1 : : O ' 1 . ; 1 A AS AS roll. cl o es E =, - a o 1 cd : o Sd Le AS Él : : 0 e de 382 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Ambos diámetros crecen de los Y á los 1Saños, pero en propor- ciones muy diferentes; el longitudinal importa una diferencia en el hombre, de 16 mms. mientras que el transversal sólo de 9 mums,, lo que confirma de una manera singular, las estadísticas de Quete- let. Cosa igual, pero en menor escala, sucede á la mujer. El ante- ro-posterior arroja una diferencia de 10 mms., mientras que el transverso sólo de 6 mms. Estos datos explican la evolución hacia el cráneo alargado, el hombre más que la mujer y forma más redonda en ésta. El crecimiento antero-posterior es rápido hasta los 12 ó6 13 años; cantinúa hasta los 16 en la mujer con bastante más lentitud que el hombre. De los 16 adelante, si aumento existe es insignificante. De modo que enel sexo débil, se nota en el desa- rrollo, una especie de infantilización. El crecimiento transversal ofrece varios periodos: de 6 48 años; de 10 á 12; de 14 á 15 deteniéndose á esta edad, en ambos sexos. De modo que alcanza su desarrollo definitivo á los 16 años. El varón ofrece una amplitud de crecimiento poco más pronunciada que la mujer. Tocante á sexos, á todas las edades, ambos diámetros, aparecen mayores en el hombre, lo que significa mayor volumen de masa cefálica y por lo tanto, cosficiente intelectual más alto (E. Rabaud, Revue de L'Ecole D'Anthropologie, Febrero 1906). Otras observaciones: En el curso de nuestras investigaciones, hemos anotado un hecho de valor didáctico no advertido por los antropólogos. En igualdad de edades, los jóvenes de mayores diá- metros cursan años más adelantados que los de diámetros menos extensos. Asi, sumados los primeros 25 diámetros correspondientes á alumnos de una misma edad, pero cursando años avanzados, arro- jan cantidades mayores que los 25 diámetros de los cursantes en años ó grados bajos. Para 16 años: Primeros 25 antero-posteriores daln............. 4.759 mms. Segundos 25 » A ES AIDA Primeros 25 transversus DIA 3.163 » Segundos 25 » o ras 8.705 >» Para 14 años: Primeros 25 antero-posteriores dan ........... 4.653 1nms. Segundos 25 » A E 4.60. >» Primeros 25 transversos A 3.7118 » Segundos 25 » A AS O » MERCANTE: VARIACIÓN DEL ÍNDICE CEFÁLICO 383 A Para 13 años: Primeros 25 antero-poteriores dan ........... 4.647 mms. Segundos 25 » OOO 4.5380 » Primeros 25 transversos ts ago A E Segundos 25 » DE 3.639 >» Para 14 años (mujeres): Primeros 25 antero-posteriores dan ........... 4.550 mms. Segundos 25 » EX do conoc ... 4.485 » Primeros 25 transversos os 3.638 » Segundos 25 » O OE 3.5988 » Para 13 años (mujeres): Primeros 25 antero-posteriores dad........... 4.552 mms. Segundos 25 » 7 ovaudanont 4.454 » Primeros 25 transversos Do daVadovoode SIDO Segundos 23 » ROO » En lo concerniente á máximas y á mínimas, el mayor diámetro longitudinal de los 651 varones, corresponde á uno de 15 años, que cursa el Colegio Nacional, 212 mms. El mínimo á un niño de 6 años, 160. El mayor diámetro transverso, corresponde á dos jóvenes, uno de 13 y otro de 16, 150 mms. El menor diámetro transverso á uno de 10 años, 131 mms. El mayor diámetro longitudinal de los 549, correspondientes á otras tantas niñas, es el de una joven de 17 años, 197 mms. El mayor diámetro transversal es el de una niña de 13 años, 155 mms. El menor diámetro antero-posterior es el de una niña de 12 años, 161 mms. El menor transversal es el de una niña de 15 años, 130 mm. Las diferencias entre la longitud máxima y minima correspon- diente á una misma edad, oscila entre 19 y 30 mm. Las diferencias entre el ancho máximo y el mínimo, correspon- diente á una misma edad, oscila entre 15 y 25 mm. En ambos casos l'écart es de 10. AS YU] cdo mí SY dl e Bid Sade in sold GU Fo Mepst ek 1d ay lla, DAS aa 3 Ll Hari opi: md pd e it dd AP ani RIAS pull e + . MANDY Í AN ESA Al Ñ st "W qn. 5 a Ú 7 . $ $ sm Ñ 4 AE " Ñ y 5 . ñ ' . Ó > met 4 "Wi Ea 5 A H Ju re LATA 1000 o Me y MA PEA F A Y y. IAE PIN? SAN ¡ ú ] e í MN NA, 3. Ñ 7 ' ña arid Pr | MÍ de pa e E ts e. AI E AI A de Eo ñ e ym Ñ A TE 0 AU eb ¿ee TEN Ñ A Ap di! Ñ . pe b e ñ vd Í AÑ S » 4 plz a á Dee , ' y » Í í MN y $“ $.) Y - ÍDOLO ZOOMORFO DEL ALTO PARANÁ CONTRIBUCIÓN Á LA ETNOLOGÍA AMERICANA POR JUAN B. AMBROSETTI Hace algún tiempo que el señor Pedro Serié me avisó de la existencia de este idolo entre las colecciones del gabinete de Histo- ria Natural del ex-colegio Gorostarzu. Solicitado este ejemplar para el Museo Nacional, el Dr. Mario Gorostarzu, rector de dicho colegio, tuvo la gentileza de cedér- melo, y hoy figura entre sus piezas interesantes, con el número 4255 del catálogo. El ídolo que nos ocupa es de madera y tiene agregada una tarjeta de visita, de luto, del señor J. Antonio de Uribe, con la indicación de su antiguo domicilio (Esmeralda 15), y en el reverso la siguiente leyenda manuscripta: «Ídolo que me regaló la madre del cacique de la tribu de los tains en las márgenes del Itaimbé guazú; imita al murciélago con cola de vívora de cascabel. Alto Paraná». Tan extraordinaria leyenda me llamó fuertemente la atención é inmediatamente escribi al señor Uribe quien recibió mi carta y tuvo la deferencia de hacerme una visita en la cual me dió los datos que pudo respecto del idolo en cuestión, reconociéndolo y comunicándome que había sido recogido por el año 1873 en sus correrías por los yerbales paraguayos, pero sin recordar á quien lo había regalado y cómo había ido á parar á su actual destino. Sobre los indios Tains no me pudo dar datos especificos por cuanto nunca reparó en ellos, refiriéndome que sólo los había tratado de paso en sus viajes y en condiciones puramente fortuitas. Pero á pesar de todo, el hecho era cierto y estaba alli claro y terminante: el ídolo, la tarjeta y la propia letra. 386 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. LOS INDIOS TAINS En la literatura muy pocas veces Ó casi ninguna se cita el nom- bre de estos indios. La primera noticia que de ellos tuve fué la que trae el capitán Giacomo Bove en una relación de viaje al Alto Paraná!. También este explorador dice que no halló noticias de ello en los libros y sólo cita el dato que le suministró su acompañante el valiente explorador de Misiones, Señor Adan Lucchesi. . He aquí cómo se expresa Bove al respecto: «Dei Tain io non ne ho mai veduta traccia ne'libri da me esami- nati, Lucchesi fú quello, che per primo ne portó la notizia alla costa del Paraná. In selvatichezza poco diferiscono dai Guagia- chil, ma di molto li sorpassano in ferocia. Fortunatamente non sono che poche famiglie vaganti fra i due torrenti che unendosi formano lItambé-chico». Según lo que precede, estos indios vivirian en el Potrero Itaimbé, donde tiene sus nacientes el arroyo Itaimbé-mi: y, de acuerdo con la afirmación del señor Uribe, debemos extenderlos hasta más al Norte, sobre el Itaimbé-guazú. En publicaciones anteriores á la de Bove que yo conozca, á todas las tribus de la región que nos oenpa, se las supone guaranies ó se las confunde con los calnguá que allí también viven. Azara ?, al hablar de los Indios Guayaná, los divide en dos clases: La primera (tratada en el párrafo 642) se refiere á los indios que habitan los bosques occidentales del rio Uruguay que no hablan ni entienden el guarani, que su idioma parece á los gritos de perro; pero él no los ha visto y sólo da el dato que les dió el jefe portu- gués en 1759, quién los trató en la demarcación de límites. Esto s seguramente eran los kaingangues. La segunda clase de guayanás, citada por Azara (párrato 645), es la que vivía entre el río Caraguarapé (quizá el actual Guara- 1 Bove. NOTE DI UN VIAGGIO NELL'ALnro Paraná. Bolet. de la Soc. Geog. Italiana. Ser. II. Vol. IX. Pag. 941. Año 1884. 2 Geografía Física y Esférica de las Provincias del Paraguay y Misiones Guaraníes. Publicada por el Museo Nacional de Montevideo con Bibliografía, Prólogo y Anotaciones por Rodolfo R. Shuller, 1904. AMBROSETTI: ÍDOLO ZOOMORFO DEL ALTO PARANÁ. 387 pai) y el rio Monday, por el norte, en el cual se dilataban hasta unirse con los Caaguas (Cainguá) y por la banda Este del Río Alto Paraná, desde un poco más arriba de Corpus hasta el rio Iguazú 6 Curitiba, ignorando los demás linderos. Para Azara son guaranies por su idioma, etc., pero agrega que tienen canoas y pescan. La región indicada por Azara es la que se halla en algunos mapas como habitada por los indios Guayaná y, casi en el medio, sobre el Alto Paraná, una legua más ó menos al interior, existe TAMAÑO NATURAL a b Visto de frente. Visto de espaldas. aún el pueblo de Villa Azara, sobre el arroyo Pira Puitá, que es un resto de una antigua reducción de estos indios, cuyos descendientes aun viven alli, pero que no son de la estirpe guaranl. Curioso es el dato de la ocupación de las altas Misiones Argen- tinas sobre las costas del Paraná por estos mismos guayanás, que como ya se han identificado con la estirpe kaingangue, nos haria suponer que los que aun viven en San Pedro de Monteagudo no serían los únicos de esa estirpe que habitaron el territorio misionero. 388 MUSEO NACIONAL DE BUEMXOS AIRES. Un dato sugerente es el modo de llevar el pelo cortado en forma de una corona, como nuestros clérigos, corte típico de los kaingan- gues, á los cuales por esto los brasileños les llamaron coroados, es decir, coronados ó con corona. Los cainguá, por otra parte, alguna vez lo usan también asi, pero principalmente los niños. La afirmación de Azara de que estos indios eran guarani, no creo que tenga fundamento; puede que haya tratado algunos que supiesen guarani por el contacto que tenian en los yerbales con los indios misioneros á quienes ayudaban, según el mismo autor, ó que los hubiese confundido con verdaderos cainguá por lo del barbote, cosa, por otra parte, que no vió, puesto que declara que ignora su forma; de manera que un poco por. algo visto y otro por algo oido, nuestro autor confeccionó su segunda clase de guayanás como pudo, dejándonos siquiera el dato inapreciable de su distribución geográfica en su época. Rengger * se despacha mucho más fácilmente que el ilustre Azara diciendo que todos los indios de la región que nos ocupa eran guaranies, y asi lo indica en su mapa. Y en el Cap. VII Des Habitans Primitifs du Paraguay (pág. 104), divide á estos indios asi: «Les divers tribus des guaranis sauvages ont comme autrefois des noms differens, d'apres les districts qu'ils habitent. Ainsi ceux qui vivent dans la Sierra de St. José, vers Cerro Pyta s'appeJlent Caayguas, ceux qui se trouvent an nord de Curuguaty, dans la Cordillere de Maracayu, sont les Carimas, et ceux qui parcourent les foréts á Vest d'Ihu et de St. Joaquin portent le nom de Tarumas. Demersay*trata á los indios de la región que nos ocupa de gnaranies no sometidos, y dice: «Sur cette vaste etendue ils habi- ten de preference les sources du rio Igatimi, les bords des affluents du Paraná, et lo chaine de montagnes peu elevées que nous avons decrite sons le nom de Cordillere de San José oú de Mbara- cajú ». En 1896, el que esto escribe publicó una serie de vocabularios * 1 Reise nach Paraguay, von Dr. J. R. Rengger, Aarau, 1835. : Histoire Physique, Economigue et Politique du Paraguay et des Etablise- ments des Jesuites. Tomo I. Paris, 1860. Pág. 329. * Materiales para el estudio de las lenguas del grupo kaingangue (Alto Paraná), en el Bol. de la Acad. Nac. de Ciencias de Córdoba. Tomo XIV. Pág. 331 y sig. 1896. AMBROSETTI: ÍDOLO ZOOMORFO DEL ALTO PARANÁ. 389 recogidos en el Alto Paraná, llamando la atención sobre la seme- janza que presentaban las voces con las del idioma kaingangue que anteriormente había publicado ?. En ese trabajo decia: las tribus que hablan el idioma de los vocabularios que hoy publico se hallan ubicadas en la región del alto Paraná comprendida entre el arroyo Yuitorocay y el Salto del Guayrá, en ambas orillas del rio. El idioma á que me refería era el Ingain. Entonces les daba como limite norte el arroyo ltaimbé-guazú, guiado por algunos datos incompletos que había recogido; hoy vemos por el objeto que nos ocupa, que en sus orillas también saben vivir, y por los datos que me ha proporcionado el señor Antonio Zillich, quien los ha tratado, vemos que hay que extender ese límite hasta el río [yatimy. Entonces también dije que á este grupo de indios algunos les llamaban Tains y creia que era por haber oido mal, pero parece que esa denominación ha sido voz corriente entre las gentes yer- bateras, pues Lucchessi me habló de ellos yme dió un pequeño vocabulario que también publiqué, y el señor Uribe asi lo escribió en la tarjeta que acompaña á la pieza. Y digo entre las jentes yerbateras porque ellos por abreviar es muy posible que de Ingains hayan hecho Tains y de Tains resul- tase luego Tey,que es el nombre con el cual los ha conocido el señor Zillich ?. 1 Los indios kaingangues de San Pedro (Misiones), con un vocabulario. En Revista del Jardín Zoológico de Buenos Aires. Tomo II. Pág. 305 y sig. 1895. 2 El señor Antonio Zillich, empleado en el ministerio de Obras Públicas de la Nación, ha viajado mucho anteriormente en el Paraguay. En todas sus excursio- nes ha llevado prolijas anotaciones en libretas que he tenido en mi poder bas- tante tiempo, facilitadas gentilmente por él. Mucho le agradezco su desprendimiento y los apuntes sobre estos indios que me ha entregado extractados de sus libretas y traducidos al español. Creo que es lo único que hasta ahora se haya publicado sobre esos indios, lo que hace más valiosa la contribución de mi buen amigo, y por eso es que no he querido, al transcribir su manuscripto, cambiar una sola palabra. Posteriormente á estos datos sólo me resta consignar los publicados sobre su idioma Ingain-Ivitorocai, por el Rev. P. Federico Vogt, en 1901, en el Tomo xxxtv de Mitteilungen der Anthropologischen Gesellschaft in Wien, quien de acuerdo con lo que yo había indicado en 1896, los coloca también entre el grupo de los Coroados. (Kaingangues). Ana. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*%, T. x1v. Agosto 22, 1911. 25 390 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. LOS INDIOS TEY Apuntes del señor Antonio Zillich Los indios «Tey» habitan la parte Nord-Este del Paraguay, re- gión comprendida más ó menos entre Igatimi, Curuguaty, cabece- ras del rio Itaiembey y río Piratiy; son nómades y se mantienen de la caza. Por el contacto con la civilización la mayor parte tiene ya tolderías fijas ó ranchitos y cultivan maiz y porotos muy pequeños pero muy sabrosos (cumandá-sal). Á veces se ofrece el cacique con toda su tribu para trabajos de elaboración de la yerba- mate (¡lex paraguayensis) y se le conchaba con sus 30 4 40 hombres para los trabajos más fatigosos, que son la extracción de las hojas de la yerba de los bosques, dándoles como recompensa de sus trabajos hechos, útiles ó ropas, como ponchos, cuchillos y hasta armas de fuego, que naturalmente nunca son de valor relativo al trabajo hecho. (Por un poncho de algodón de un valor de 5 pesos cuando mucho desmontan una cuadra de monte tupido). Dinero no aceptan nunca. Será por ser papel. Los Tey son como vulgarmente se dice individuos mansos, por lo general de estatura regular, no muy altos, de cuerpo bien desenvuelto, manos y pies pequeños pero proporcionales. Sus facciones son las características del indio Central americano. La musculatura de los brazos no es muy desenvuelta para no decir débil, en cuanto la de las piernas es, á lo contrario, muy fuerte y demuestra extraordinaria resistencia, lo que prueba que los Tey deben ser incansables en marchas á ple. El Tey no es de á caballo ni lo conoce ninunca llegué á ver á un indio de esos á caballo: eso será, tal vez, por lo montañoso que es el terreno que habita. El Tey (aunque toma por ofensa llamándolo así) no usa tatua- ciones, ni el hombre ni la mujer, y ambos usan el pelo, digo cabe- llera, cortado en la frente á la altura de las cejas y lo restante á la altura de las espaldas; en el resto de sus cuerpos no se encuetra ni un solo pelo, ni en las cejas, ni párpados ni barbas y parece que una vez que se muestra un pelito en esas partes lo arrancan. Los hombres se visten, sl así quiere llamarse, en cuanto son menos civilizados, con una angosta tira de cuero de venado ó ciervo cur- tido y tan suave como paño, atado por las caderas y del que cuel- AMBROSETTI: ÍDOLO ZOOMORFO DEL ALTO PARANÁ 3891 gan dos puntas largas hasta los pies; lleva brazaletes de plumas de diversos colores y muy minuciosamente trabajados; otras ropas no llevan. Sus armas son el arco y la flecha, siendo el primero de á lo menos 1*/, metros de altura y hecho de la parte exterior de la palma «Pindó» con cuerda de la fibras del ananás silvestre (Cara- guatá). Las puntas de las flechas son hechas de madera (Curupay ó corazón del Guayaivy) y miden 40 centímentros de largo y un centímetro de espesor siendo dentadas de un lado, hallándose colocadas dentro de una caña hueca (Tacuapi) con cera de la abeja silvestre y liada con la corteza de una liana muy resistente (Cipo- hú). Para tirar emplean esos indios los pies con extraordinaria habilidad y son muy certeros con sus armas. En marcha matan cuantos animales encuentran al alcance de sus flechas, desde el pajarito más pequeño hasta el ave más grande, para las cuales usa flechas sin punta, con un botón de madera para no destrozar las presas. Cuando los Tey matan áun animal grande como Tapir (Gran Bestia en guarani Mborevy), que es la carne más apreciada para ellos, se reune alrededor de la presa toda la tribu á celebrar un festín que dura hasta haberse devorado todo el Tapir, de manera que no sobra ni el cuero ni los intestinos ni la medula de los hue- sos, los que destrozan para extraerla; y el tigre ó zorro que llegue al lugar después de haber terminado la comilona podrá usar como escarbadientes únicamente los fragmentos de huesos que hallará en ese lugar. Las mujeres se adornan con brazaletes semejantes á los de los, hombres y los llevan también en los tobillos; además tienen collares hechos de huesitos de serpientes, uñas de tigre y oso hor- miguero, dientes de tigre y puma, etc. En cuanto son jóvenes se encuentra entre ellas algunas de bastante lindas facciones pero muy pronto se marchitan esas flores y quedan, aunque no muy viejas, horriblemente feas y flacas. En marcha las mujeres acarrean el equipaje ó las criaturas de corta edad, el cual llevan dentro de una bolsa de cuero la que por una correa de cuero es sujetada en la frente y cuelga 4 las espaldas de la mujer, la que lleva otro chico gineteando en su cadera, sujetándolo con un brazo. Acercándose un extranjero (el paraguayo también es considera- do como tal) 4 una toldería ó acampamento de los Tey, desapare- cen á una señal todas las mujeres jóvenes y niñas, no quedando más que los hombres y ancianas y después de algunos alas, recién cuando el indio ha recibido tantos regalos que le han convencido de las buenas intenciones y de que puede tener confianza, apare- 392 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. cen poco á poco las hermosuras salvajes. Su idioma ó lenguaje no es el guarani ni semejante, y por más que uno sepa hablar con la mayor perfección este último, no comprende nada de lo que ha- blan los indios entre sl. Fabrican del maíz fermentado (según se dice maiz masticado) una bebida embriagadora, en calabazas, la que toman haciendo una especie de baile poniéndose los hombres en una hilera y las mujeres en otra, dándose las espaldas. Aun canto monótono y con unas calabacitas, llenas de piedritas, con las que marcan el com- pás, se alejan esas dos hileras algunos pasos y vuelven á acercarse hasta tocarse con las espaldas y así sucesivamente. El 'Tey es por lo general hospitalario, pero aconsejo á todos los que, por desgracia, llegasen á tener que acudir á la hospitalidad de los mismos, de acampar lo más lejos posible de la toldería, primero por causa de los parásitos, cohabitantes é inseparables compañe- ros del indio y segundo por molesto que es el indio, pues es incan- sable en pedir regalos; además no es muy agradable ver cómo las matronas indias sentadas en el sol, desnudas, con la cabeza de otra niña ú hombre en la falda, quitándole de la cabeza los pará- sitos, los que matan con los dientes, si los tien>, y sino con las encías. Hasta aquí los datos del Sr. Zillich. Ahora no nos queda decir sino dos palabras sobre el objeto mismo, muy tosca y primitiva- mente tallado, y si no fuera la inscripción que lo acompaña no habríamos interpretado su significado. Esta combinación de murciélago y serpiente de cascabel es muy curiosa. El murciélago en este caso es hembra y lo demuestran los dos pechos pronunciados. ¿No tendría esto nada que ver con algunos de esos seres mitoló- gicos de la región misionera como la Caa-pora, la Caa-yari y otras que son también femeninas? En cuanto á la cola de la serpiente no hay que olvidar que los adivinos ó médicos, entre los Kaingangues, se llaman Pan-dere, es d>cir, cola de serpiente, y este objeto femenino, con cola de ser- AMBROSETTI: ÍDOLO ZOOMORFO DEL ALTO PARANÁ 393 piente en manos de una vieja ¿no sería un potente talismán ó febi- che, digno por eso de ser regalado á una persona reputada superior, ya para hacerle bien ó más fácilmente para acarrearle desgracia? De todos modos, cualquiera que haya sido su destino, siempre será una pieza interesante y quizás casi única manifestación de arte escultórico entre esos indios. Buenos Aires, Mayo de 1910. de - ade CE (UE ) Ata NE ¿gño e 113) 19 “ a agita] viral IG auto ne Ta pr y YN 5 AR IA e +) 0 1440 y Tuy le lab HR FE LOT MOT y EN Di) ! Ú j UN Y Mm hp E h j BA! b »] . y 1 o >) rm y Ú o ' Le »E CN ed SARA Aja e e Ú ye Ab dle lo o edad sj arta plnra , ODO sol sl al or id ee dy, gu pánaa | nn - Ñ y (b o pia | ms Ae 4 : «4 q Ate pe ñ e 0H sb, ATA E 4 ¡$ mv 1.4 i AM ) a ¡7 ' M Y Y e nm y Im la p] ww: 0 A AA es "a tn » bl Ca ron > ISOPODES DU SANDWICH DU SUD BY HARRIET RICHARDSON. Exospheeroma antarctica [IoHARDSON Exosphaeroma antarciica Richardson. Expédition Antarcti- que Francaise (1903-1905) commandée par le Dr. Jean Charcot, Crustacés, Isopodes, 1905, pp. 3-4. Localité.—Iles Sandwich. Lahille, 1910. Neuf individus. Cymodocella tubicauda PrerFER Cymodocella tubicauda Pfetfer, Jahrbuch der Hamburg. Wi- sensch. Anstalten, 1v. 1887, pp. 109-115, pl. 11, fig. 8; pl. vi. figs. 11-12. Spheroma egregria Chilton, Trans. New Zeal. Inst., XXIV, 1892, p. 269. Cymodocar antarctica Hodgson, «Southern Cross» Collections, 1902, Crustacea, pp. 243-245. Ciymodocella egregria Hansen, Quarterly Journ. microsco pl- cal Science, xLIx, pl. 1, 1905, p. 126.—Richardson, Expé- dition Antarctique Frangaise (1903-1905), commandée par le Dr. Jean Charcot, Crustacés, Isopodes, 1906, p. Y. Cymodocella tubicauda Richardson Expédition Antarctique Francaise (1903-1905), commandée par le Dr. Jean Char- cot, Crustacés, Isopodes, 1305, pp. 4-5.—Chilton, Sub-an- tarctic Islands of New Zealand, 1909, p. — Hodgson, National Antarctic Expedition, Natural History, v, 1910, pp. 31-31. Localité.—Iles Sandwich. Lahille, 1910. Trois individus. 0) de) O) MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Serolis polita Prerrer Serolis polita Pfeffer, Jahrbuch des Hamburgischen Wissens- chaftlichen Anstalten, 11, 1887, pp.S1-85, pl. 1, figs. 4-5.—— Richardson, Expédition Antarctique Francaise (1903-1905) commandée par le Dr. Jean Charcot, Crustacées, Isopodes, 1906, p. 7, 1908, p. 5. Localité.—Sandwich du Sud. Lahille, 1910. Dix individus. The apex of the terminal abdominal segment is more acute than shown in Pfeffers figure. Serolis polaris sp. nov. Body broadly ovate, almost circular in outline, equally wide as-long, 22 mm. 22: mm. Color white. Head large, wider than long, 6 mm. : 4mm. The anterior margin is produced in a small median póoint, on either side of which there is a slight excavation for the reception of the basal articles of the antennae. On either side of these excavations the margin is produced forward, curving widely, and at the antero-lateral angles is drawn out in acute processes. Just behind the antero-la- teral processes, the lateral margins are constricted, so that the anterior portion of the head at this point is much narrower than the posterior portion. The eyes are placed in the posterior portion of the head near the lateral margins, and are reniform in shape. Betwen the eyes and a little anterior to them, are two rather flat. ronnded proceses, free at their posterior extremities from the surface of the head, situated one on either side of the median line. Close to the posterior border of the head are three flat processes, one median and one on either side, placed between the eyes and a little posterior to them; the median one is rounded posteriorly and not free, the lateral ones are angular, and free posteriorly from the dorsal surface of the head. The fisrst pair of antennae have the basal article large; the second article is about one and a half times as long as the first and is also somewhat dilated; the third article is narrow and is a little shorter than the second; the fourth article is less than half the length of the third; the flage- RICHARDSON : ISOPODES DU SANDWICH DU SUD. 397 llum is composed of eleven articles and extens a little beyond the peduncle of the second antennae and almost to the post-late- ral angle of the first thoracic segment. The second antennae have the first article of the peduncle short and not visible in a dorsal view; the second article is produced forward and is geniculate with the third article, which is a litle shorter than the second; the fourth; article is twice as long as the third; the fifth article 1s more slender and a little longer than the fourth; the flagellam, composed of twenty-one articles, extends to the post-lateral angle of the second thoracic segment. Fig. 1.— Serolis polaris. Xx. The head is deeply set in the first segment of the thorax. The lateral portions of this segmsnt are broad and are separated into two parts by a curving transverse ridge; the post-lateral angles are acutely produced. The five following segments also have the posts lateral angles acutely produced backward, those of the sixth segment extendig tho the post-lateral angles of the terminal ab- dominal segment. The epimera of the second, third, fourth and fifth segments are marked by a suture. On the posterior margin of the second, third, fourth fifth and sixth segments, just within the epimeral suture is an angular prominence on either side. All 398 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. six segments of the thorax have the posterior margin produced backward in a median tooth, which increases gradually in size froms the first to the fourth, which is very large and then decrea- ses In size, the last two being about equal. The seventh thoracic segment 1s visible only on the ventral side. The abdomen is composed of four segments, the first thee of which are short and subequal in length. The lateral parts of the first segment are covered by the sixth thoracic segment; those of the second segment are produced a little beyond the post-lateral angles of the sixth thoracic segment; those of the third segment are short and are produced only a little distance. On all three seg- ments, there is a median tooth on the posterior margin, similar to those on the thoracic segments. The terminal segment has the sides slightly converging and terminating in an acute tooth on either side. The posterior margin 1s produced in the middle in a very obtuse angle. 'The dorsal surface is furnished on either side with a curving ridge, situated close to the anterior and lateral margins of the segment. Below this on either side is a second ridge originating near the middle of the segment and terminating a short distance from the lateral margin in an angular process. There is a small, flat angular process, one en either side of the median line near the base, where the second ridge originates. A long, promi- nent, acute spine is situated in the median line on the anterior portion of the segment. On the posterior portion of the segment is a ridge produced into three very long, acute, flat spines, vne in the median line and one on either side, the median spine being as long as the median spine anterior to it. The uropoda are similar in shape, the outer being smaller and shorter than the inner one, with the posterior extremity broadly rounded; they are inserted just within the lateral tooth of the terminal segment. The first pair of legs are subchelate with the propodus broadly oval. Six specimens, all females, were collected af the Sandwich du Sud in 1910 by Lahille. The type is in the Museum d'Histoire Naturelle de Paris. his speci:s is closest to Serolis schyt*ei Liitsken. *. 1 Vidensk. Meddel. f. d. nat. Foren. i Kjobenhavn, 1858, p. 98, Taf. 1, figs. 12-13. RICHARDSON : ISOPODES DU SANDWICH DU SUD. 399 Serolis laevis sp. nov. Four specimens of a new species of Serolis were obtained by M. Dr. Lahille in 1910 at the Sandwich du Sud. This species is close to Serolis plana Dana, to Serolis convexa Cunningham and to Se- rolis gaudichaudii Audouin and Milne Edwards. In comparing them with the three species mentioned, y will point out the points of resemblance and the points of difference. This species differs from Serolis plana as described and figu- red by Jana * (1) in not having the margins of all the thoracic segments «closely in contact, quite to the lateral margin», the outline being broken at the fifth segment, which is somewhat narrower than the fourth; (2) in having the flagellum of the se- cond antennae longer, extending to the middle of the third tho- racic segment instead of to the middle of the second segment; (3) in having the tip of the last abdominal segment truncate in three of the specimens and slightly upturned; (4) in the different shape of the eyes which are reniform; (5) in having the median and lateral ridges of the terminal abdominal segment almost obsolete, as well as the lateral tooth on either side; and (6) in the absence of the prominences of the fourth segment of the thorax, just within the epimeral sutures. These differences are constant in all the specimens. Beddard ? says of Serolis convexa Cunnigham ?, that 16 1s clo- sely allied to Serolis plana and that 1t is «Almost impossible sa- tisfactorily to separate them». The present species agrees with Serolis convexa in having the last two segments of the thorax narrower than the preceding ones; in the shape of the eyes and in the longer first and second antennae. It differs, however, in the absence of the «three well marked ridges, a median, inte- rrupted in the middle, and two lateral, each terminating in a sharp point». It also differs in the longer lateral angles of the sixth thoracic segment, which extend some distance beyond the lateral angles of the second and third abdominal segments, but in Serolis convexa are short, not extending beyond the angles of 1 U.S. Expl. Exp., x1v, 1853, Crust., Pt. 2 pp. 794-795, pl. 53, figs. 1*-c. 2 Challenger Report. The Isopoda, Pt. 1, 1881, p. 38. 3 Trans Linn. Soc. London, xxv11, 1871, pp. 498-499, pl. Lix, fig. 3. A00 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. the second and third abdominal segments !. The shape of the last abdominal segment is also different in the two species being less pear-shaped in the specimens from the Sandwich du Sud and truncate at the tip. Serolis convexa is described as being ofa uniform-pale brown color, while the specimens from the Sand- wich du Sud are uniforsuly white Serolis Gaudichaudii” Au- douin and Milne Edwards is another closely allied species. The new species agrees with the former in having the lateral ridges of the terminal abdominal segment very faint and in the more truncated tip. It differs, however, in the longer antennae; in Fig. 2,— Serolis laevis. x. having the last two segments of the thorax narrower than the preceding ones; in the absence of an epimeral suture on the fifth thoracic segment; in having the suture on the opercular valves more nearly transverse; in the different shape of the terminal abdominal segment; and in the almost complete absence of tho median keel, and in the different color, Serolis Gaudichaudii being described as dark brown and dotted all over with black spots of various sizes. 1 This is true of Cunninghams figure, but in the specimens in the U. $. Nat. Museum and in Studer's figure, (Abhandl K. Akad. Missenschaften zu Berlin, 1883 [1884), Taf 1, fig. 1.) the lateral angles of the sixth thoracic segment are lon- ger. Studer's figure does not show the median and lateral ridges on the terminal abdominal segment, so characteristic of this species. ? Archives du Muséum d'Histoire Naturelle, n. 1811, pp. 22-25, pl. 1, 2, figs. 1-7. RICHARDSON: ISOPODES DU SANDWICH DU SUD. 401 NOTES SUR LES ARCTURUS PAR M. E.-L. BOUVIER Antarcturus adareanus HoDbGson Arcturus adareanus —E. V. Hodgson, Report on the Collection of Natural History made in the Antartic Region during the voyage of the «Southern Cross» (1902), p. 249, 250. Arcturus adareanus—E. V. Hodgson, National Antartic Expedition, Natural History, vol. v. Crustacea IX, Isopoda (1910), p. 35, 61, v. fig. 1. Deux exemplaires pris aux Sandwich du Sud (Musée de Buenos-Ayres et de Paris). Antarccrus antarcticus E.-L. Bouvier Antarcherus antarcticus—E.-L. Bouvier. Revista chilena. Año XIV (1910), 109 Ie alsro af la, EI Un exemplaire. Cette espéce a été réecemment décrite par M. Bouvier qui en a donné la des- cription suivante: e - E 1-8 det > EMO AAA MW tin "0 A > ] HA mn sd A yu Pa NN % o y y o e ” > ) E o dá ' $4 E > Me atribiti is! EA Phi a” "A ' A An a - - 6 a A yd Ñ m. hi eri le dls nm PIDE a he 440 Cr MÁ A LL” ¿ME p y o Y y yA % : E y q Ú $ a PI de 5 sh ATMIDONA Am mala e VOS S ú de : . 100 rt1g á L ¿Lee 14n dub MAVIHS1 les ir A 2 3 PE 0 iy AT ¡54 Pé, ys ly e ( A, - 104 MM h ¡ AO 4 l apursizba arar id qn y j Ñ boa 1] p vu A » A | 5 po e SUR QUELQUES AMPHIPODES DES ILES SANDWICH DU SUD PAR M. ED. CHEVREUX. La petite collection d'Amphipodes des iles Sanwich du Sud pré- sertée par M. le Dr. F. Labille, correspondant du Muséum a Buenos- Ayres, comprend quatre espéces, capturées par 30 a 50 brasses de profondeur. Deux de ces espéces avaient été trouvées dans lP'An- tarctique par lExpédition du Francars. Ce sont: Waldeckia obesa Ed. Ch., représentée par une femelle de 17 mm de longueur et Atyloides brevicornis Ed. Ch., dont une douzaine d'exemplaires ont été obtenus. Ces exemplaires, de plus grande taille que ceux du Francas, atteignent jusqu'a 18 mm de longueur; les yeux sont beaucoup plus grands que chez la forme de l'ile Booth-Wandel. Les deux autres espéces sont nouvelles. Oediceroides Lahillei, nov. sp. Femelle avec embryons. — Corps assez obése, mesurant 21 mm de longueur. Téguments épais et consistants. Premier segraent du mésosome présentant deux bourrelets transversaux, séparés par un sillon assez profond. Deuxiéme, troisieme et quatriéme segments portant, au bord antérieur, un sillon transversal, sulvi d'un bourre- let volumineux. Sillons et bourrelets s'atténuant et plus on moins nettement visibles dans les trois derniers segments du mésosome et dans les deux premiers segments du mésosome. Dernier segment du métasome et urosome lisses. AGA MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Téte portant, au milieu du bord dorsal, un gros tubercule arrondi, un peu dirigé en avant. Rostre court, gibbeux, entiére- ment occupé par les yeux. Fig. 1.—Oediceroides Lahillei. Téte et premiers segments du mésosome. Antennes supérieures á peine aussi longues que la téte et dépa- ssant un peu l'extrémité de lavant-dernier article du pédoncule Fig. 2. — Oediceroides Lahille. A, antenne supérieure; B, antenne inférieure; O, mandibule droite; D, maxille antérieure; E, maxille postérieure; F, maxillipede; G, gnathopode antérieur; H, péréiopode de la deuxiéme paire; I, telson. (A, B, €, DEE 166, Bl >< 8). des antennes inférieures. Premier article du pédoncule un peu plus long que lensemble des deux articles suivants. Flagellum CHEVREUX: AMPHIPODES DES ILES SANDWICH DU SUD. 405 composé d'une quinzaine d'articles. Antennes inférieures trés robustes. Dernier article du pédoncule beaucoup plus court que Particle précédent. Flagellum un peu plus long que l'ensemble des deux derniers articles du pédoncule et composé d'un trés grand nombre d'articles extremement courts, portant presque tous une calcéole au bord antérieur. Palpe des mandibules robuste, dernier article beaucoup plus court que l'article précédent. Lobe interne des maxilles antérieures tres large, bordé de neuf soies ciliées; lobe externe armé de neuf épines. Lobe interne des maxilles postérieures un peu plus large que le lobe externe et portant des soies sur la plus grande partie de son bord interne. Palpe des maxillipedes gréle et allongé. Lobe du carpe des gnathopodes antérieurs tres développé, pro- longé inférieurement. Propode beaucoup plus long que le carpe, ovalaire, bord palmaire se confondant avec le bord postérieur. Gnathopodes postérieurs ne différant des gnathopodes antérieurs que par leur article basal un peu plus long et par leur propode un peu moins large, bien que de méme longueur. Péréiopodes modérément ciliés, Article basal étroitement ovale -dams les péréiopodes des troisieme et quatrieme paires, piriforme et presque aussi large que long dans les péréiopodes de la derniére paire. Dactyle robuste, aussi long que le propode, dans les péréio- podes des quatre premiéres paires, un peu plus conrt que le pro- pode et styliforme, dans les péréiopodes de la derniére paire. Branches des propodes de la derniére paire étroites, subégales, aussi longues que le péndoncule. Telson quadrangulaire, un pen plus long que large, bordé de nombreuses soies d'inégale talle. Cette espéce est représentée dans la collection par une quaran- taine d'exemplaires dont la longueur varie entre 15 et 22 mm. Je suis heureux de la dédier á M. le Dr. Lahille. Eusirus Bouvieri, nov. sp. Femelle ovigere.—Corps modérément comprimé, mesurant 15 mm de longueur. Mésosome lisse. Bord dorsal de chacun des deux premiers segments du métasome se prolongeant en arriére pour former une dent, plus courte et moins haute dans le premier segment que dans le second. Troisiéme segment du métasome portant une caréne dorsale, Bord dorsal du premier segment de Purosome présentant une profonde et étroite échancrure, sulvie d'une carene arrondie. ANAL. Mus. Nac. Bs. As., Ser. 3.*, T. x1v. Agosto 23, 1911, 26 dO6 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Plaques coxales de la premiére paire fortement prolongées en avant. Plaques épimérales du dernier segment du métasome régu- liément arrondies, crénelées au bord postérieur. Téte armée d'un petit rostre algu. Yeux grands, proéminents, réniformes. Antennes supérieures tres conrtes, a peine plus longues que lensemble de la téte et des deux premiers segments du mésosome. Premier article du pédoncule beaucoup plus long que l'ensemble des deux articles sulvants, bord distal armé de deux dents algies. Flagellum plus court que le pédoncule et comprenant quatorze articles garnis de touffes de soies, sans traces de calcéoles. Flage- llum accessoire semi-articulé, un peu plus court que le premier Fig. 3.— Eusirus Bouvieri. A/Emétasome et partie de urosome; B, antenne supé- rieure; C, antenne inférieure; D, gnathopode postérieur; E, article basal d'un péréiopode de la derniére paire; F, telson. (A X 7; B,C, D, E, F, GX 10). article du flagellum principal. Antennes inférieures un peu plus longues que les antennes supérieures, Quatriéme article du pédon- cule crénelé au bord distal. Cinquiéme article beaucoup plus court que le quatrieme. Flagellum aussi long que le quatriéme article du pédoncule et comprenant vingt articles garnis de toufles de soles, mais sans calcéoles. CHEVREUX: AMPHIPODES DES ILES SANDWICH DU SUD. 407 Gnathopodes robustes. Lobe du carpe tres développé. Propode beaucoup plus long que large, ovalaire, bord palmaire modérément convexe. Dactyle robuste. Lamelles incubatrices remarquablement développées. Péréiopodes des deux premiéres palres tres gréles; carpe atteignant les deux tiers de la longueur de Varticle méral; propode aussi long que le carpe. Péréiopodes des trois derniéres palres plus ou moins mutilés. Bord postérieur de Particle basal des péréiopodes de la derniére paire ne présentant pas de partie con- cave. Uropodes de la derniére paire brisés. Telson fendu sur le sixiéme de sa longueur. Bien que cette forme soit représentée seulement par un unique exemplaire, quelque peu mutilé, il est facile de voir qwelle ne peut étre assimilée á aucune des especes connues du genre Husirus. Elle se rapproche surtout d'Eusirus propinquus, des cótes de Norvége, mais elle en difféere par le forme du bord dorsal du pre- mier segment de Vurosome, par ses antennes beaucoup plus courtes, les antennes inférieures étant les plus longues, eb par son telson beaucoup moins profondément fendu. Je pric M. le professeur Bouvier de vouloir bien accepter la dédica de cette nouvelle espece, 1 y W , o 4 A " A ' 2 Ñ 5 e UA y pl Ñ 0 A IIA il ALGUNOS ANIMALES MARINOS DE LAS ISLAS SANDWICH. El año pasado, gracias 4 una gentil atención del señor coronel G. Núñez, pude conseguir una pequeña colección de invertebrados marinos, recogidos en las islas Sandwich del Sur por el capitán Larsen, quien se dedica en estas regiones á la caza de ballenas. Como mis tan numerosas ocupaciones no me permitían proceder al examen de este material, remití á mi colega del Museo de Historia Natural de París, el profesor Bouvier, algunos de los crustáceos que me parecieron ofrecer un mayor interés. A su vez, éste los repartió entre especialistas, y no está de más indicar de paso, que con la multiplicación creciente de las formas animales que de todas partes se describen, el trabajo de sistemática tiene que ser efectuado por naturalistas de más en más especializados. Recordaré por otro lado que las islas Sandwich forman la parte más avanzada hacia el Este de los fondos relativamente altos que ligan actualmente Sud América con las tierras antárticas actuales, restos de la antigua Antártida, Forman como la parte superior de un gran macizo en herradura limitado por la línea isobática de 7.000 metros y cuyo centro está constituido por el estrecho de Drake, que los oceanógrafos harían quizás mejor en llamar golfo de Drake. Las Sandwich fueron descubiertas en 17155 por Cook, y constan de unas 12 islas, islotes Ó rocas. Las tres islas situadas más al Norte forman el grupo del Marqués de Traversay, aunque para el geólogo dos de éstas tengan que referirse más bien á las dos islas Candlemar que les siguen al Sur. El grado 58% de latitud Sur pasa más ó menos por el medio del grupo de las Sand wich, medio casi en donde se levantan las islas Saunders, procedencia de la colección de crustáceos que hacen el objeto de esta pequeña nota, Más al Sur se encuentran las islas Montague, Bristol (con su pico de Freezeland, cuya forma en pan A10 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. de azúcar es notable) y por fin las islas Thulé y dos peñascos volcánicos elevados, cubiertos de nieve y de hielo. De la pequeña colección que remití al señor profesor Bouvier, el señor Coutiére ha examinado las formas pelágicas jóvenes, d. Muni- da (Grimothea) gregaria Fab. (=M. subrugosa White) y de Antarctomyia maxima H. J. Hansen. Estas formas son sumamente comunes en nuestros mares austra- les y recuerdo que una vez en Ushuaia vi el mar enteramente rojo (Munida gregaria) en casi toda la extensión de la bahía. Los Amphípodos de Sandwich han sido estudiados por el señor Chevreux. La señorita Richardson tuvo la amabilidad de ocuparse de los Isópodos y por fin el profesor Bouvier, quien había consagrado un trabajo al estudio de los Pyenogonidos del «Pourquoi pas», tuvo á bien estudiar los que le remiti; al mismo tiempo que describió como especie nueva un Antarcturus muy semejante á A. Coppirgeri Micrs. Por lo pronto aquí va la descripción de este crustácoo: Antarcturus antarctticus, sp. n. Le corps está peu pres partout de méme largeur, sauf au niveau du 4* segment thoracique libre oú il est tres légerement dilaté; 11 présente de nombreux tubercules plats qui, a partir du milieu du corps jusqu'a Textrémité de l'abdomen, deviennent plus saillants et constituent des lames squamiformes dirigées en arriére et plus ou moins rétrecies en pointe. La téte est profondément échancrée en avant sur toute sa lar- geur; du milieu de cette échancrure part un sillon médian qui se termine á un sillon transverse allant au bord postérieur des saillies oculaires, dont les yenx sont réniformes. En arriére de ce dernier sillon, la téte s'éléve quelque peu en un bourrelet transversal oú apparaissent déja les tubercules qui, en cet endroit, sont subconi- ques. Les quatre segments suivants sont tous ornés á peu pres de la méme maniére; on y voitau milieu un profond sillon transversal qui se bifurque á droite etá gauche pour délimiter quatre aires tuberculeuses: une antérieure et médiane en arc de cercle, une paire 'aires latérales triangulaires qui s'élargissent sur les flanes, et une aire en bourrelet qui accompagne le bord postérieur; ces aires sont moins nettement distinctes sur le 4* segment. Les trois ALGUNOS ANIMALES MARINOS DE LAS ISLAS SANDWICH 411 derniers segments thoraciques (fig. 1) sont bien plus courts et plus simples; ils portent prés du bord postérieur une rangée de tubercules squamiformes, subaigus et dirigés en arriére, leurs flancs se dilatent et portent des tu- bercules serrés. Les segments abdominaux (fig. 1) paraissent tous ankylosés; les deux premiers sont simplement munis d'une rangée de lames squami- formes plus ou moins algués, dirigées en arriére et situées sur leur bord postérieur; á la base du bouclier caudal se voit un segment semblable qui présente en plus quelques lames aigués vers sa base articulaire, en dessus; quant au bouclier il est recouvert des mémes saillies squamiformes subaigués, quí sont aussi longues mais libres seul- ement á leur pointe, d'ailleurs trés serrées et pres- que contigués. Le bouclier est un peu plus étroitb que le segment précédent, un peu échancré en arriére et muni de deux épines subterminales lé- gerement divergentes qui éga- lent au plus le 1/, de sa longeur. Il y a pas d'autres épines á la surface du corps. Les antennules dépassent á peine le milieu du 3* article Fiz. 1.—Les deux derniers segm- entsthoraciques et 1 abdomen. Vusdu cóté dor- sal. Fig. 2. -— Extrémité dun gnathopode. antennaire; leur article basilaire est large et plat, leur article terminal aussi long que le reste de lappendice et falciforme. Les antennes ne sont pas touta fait aussi longues que le corps; leur 3* article présente en dehors une rangée de 3 0u 4 tubercules triangulaires aigus, le 5* ar- ticle est plus gréle et un peu plus longe que le 4*, plus long également que le fouet; ce der” nier compte 9 articles munis d'un tubercule antéro-interne: Varticle basilaire porte 4 de ces tubercules et représente súrement au moins 5 articles soudés. Les pattes antérieures, ou gnathopodes, se font remarquer par la réduction de leur doigt qui est d'un tiers plus court que Particle précédent et trois fois moins large, d'ailleurs terminé par une griffe (fig. 2). Les pattes des trois paires suivantes sont plus longues et plus gróles, avec 419 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. un doigt étro:t et peu arqué, plus court d'un quart que pro- pode; elles portent en dedans, sur leurs articles moyens, une frange de tres longues soles; il y a des soies analogues, mais plus courtes, sur le bord interne des gnathopodes et la face inférieure des pédoncules antennaires. Les pattes des trois derniéres palres sont un peu plus courtes et notablement plus fortes; dépourvues de soies, elles sont munies de tubercules obtus sur leur basipodite; leur propodite est arqué, á peine plus long et notablement plus fort que leur doigt qui est également arqué et d'ailleurs robuste. Les valves operculaires de l'appareil branchial Fig. 3. — Partie TEO LITE : antérieuredu 3 rétrecissent posterieurement en ponte, entre corps. les sillons qui accompagnent leurs bourrelets mar- ginaux, elles forment une surface convexe sur la- quelle s'élevent deux ou trois rangées de tubercules squamifor- mes subaigus semblables á ceux du bouclier dorsal. Deux exemplaires máles dont le plus grand mesure 28 mm., le second a peu pres 25; largeur maximum du premier, 4 mm. Pro- viennent des Sandwich du Sud, et communiqués par M, C. Porter. (Un type au Muséum national d'Histoire naturelle de Paris, autre au musée de Valparaiso.) Cette espéece est «certainement tres voisine de 14. Coppingeri Miers, capturé par «Alert» au Trinidad Channel dans le détroit de Magellan (30 brasses). L'exemplaire type de Miers est une femelle dont la carapace est notablement dilatée aux environs des segments thoraciques 3 et 4. L'4. Coppingeri se distingue de notre espece par ses ornements en saillie quí sont de simples granules, et par les deux derniers articles de ses pédoncules antennalres qui sont á peu pres égaux et également larges. L'4. adarei Hodgson, capturé par le «Southern Cross» au cap Adare est egalement tres voisin de notre espece,surtout par son revétement de saillies aigués, mais il est muni de deux cornes frontales. PYONOGONIDES PAR M. E. L. BOUVIER. Le Pyenogonides que m'a soumis M. F. Lahille sont représentés par quatre espéces: trois Chaetonymphon et deux Leionymphon. Chaetonymphon b. o. Sars. Le genre Chaetonymphon est actuellement representé par 12 especes: Y antarctiques et 5 arctiques. Le genre n'est pas connu en dehors des régions polaires; celles des eaux antarctique se des- tinguent des especes boréales par leur tarse qu'est plus long que la moitié du propode, tandis qu'il est au plus égal á cette moitié dans les autres. Les espéces antarctiques se divisent elles mémes en deux groupes: celles oú est le tarse est pour le moins égale au propode (australe Hodgson, biarticulatum Hodgson, orcadense Hodgson, assimile Hodgson, et mendosum Hodgson) et celles oú le tarse est plus court que le propode (brevicaudatum Mier et villosum Hodgson). Les trois especes qui m'ont été soumises sont le Ch. australe H et le Ch. brevicaudatum. Le Ch. orcadense Hodgson se distingue du Ch. australe par son second tibia qui n'est pas plus long que le premier et par ses eriffes auxiliaires qui sont tres petites. Il fut trouvé aux Orca- des a Scotia Bay par l'expédition antarctique écossaise, la profon- deur étant de 15 brasses. On n'en connaissait qu'un exemplaire; deux autres, un mále et une femelle m'ont été comuniqués; ils pro- viennent également des Orcades ou ils ont été pris en 1907 par M. Olaf Paulsen (Musée de Buenos-Ayres et de Paris). 414 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES. Le Ch. australe fut trouvé en grand nombre par le «Southern Cross» au Cap Adare, a 20-26 brasses de profondeur, et décrit en 1902 par M. Hodgson. Bien qu'il n'ait pas été retrouvé par le «Discovery», le méme auteur l'a décrit de nouveau dans son travail consacré aux Pycnogonides de cette expédition, et identifié avec Ch. altioculatum Móbius capturé par le «Valdivia» aux iles Bouvet, a 436 m. de profondeur. Mais si l'espece n'est pas connue dans les mers explorées par la «Discovery», elle y présente une variété que M. Hodgson a décrite sous le nom de Ch. australe, var. austrinorum. Le Ch. brevicaudatum Mier a été identifié par M, Hock avec le Nymphon horridum Bóhm. C'est une espece largement répandue, a la fois antarctique et subantarctique, signalée d'abord aux Kerguelen par Mieri et par Bóhm, elle y aété retrouvée par le. «Challenger» (Hock), la «Valdivia» (Móbius) et M. Ralba de Baty (Bouvier). M. Pfeffer la mentionne a la Nouvelle-Géorgie, M. Hodgson aux Orcades du Sud ou elle fut capturée par le «Scotia» et le «Pourquol pas» Pa prise a l'ile Casabianca. L'espece a été prise entre 450 metres (Móbius) et 15 brasse (Hodgson); elle est repré- sentée dans la petite collection qui m'a été soumise par deux exemplaires de la Nouvelle-Géorgie. Leionymphon A Pexception du Leionymphon carolinense Leach que M. Lomau rattache justement á ce genre, les Leionymphon habitent tous les mers antarctiques oú ils sont représentés par 8 especes, 6 4 bourre- lets dorsaux saillants en ponte ou sétiferes striatum Móbtus, grande Pfeffer, gibbosum Móbius, minus Hodgson, glaciale Hodgson spi- nosum Bouvier) et 2 oú ces bourrelets sont bas etarrondis (Olausit Pfeffer, australe Hodgson.. La forme que m'a communiquée M. Lahille est un L. minus jeune mais tres caractérisé; il provient des Sandwich du Sud ou il a été pris par M. C. A. Larsen. L'espece semble tres rare; elle fut trouvée par le «Discovery» qui est capturé un spécimen dans ses quartiers d'hiver, á 129 brasses, et un autre a ile Coul- man entre S et 15 brasses. Un exemplaire ¡jeune a été trouvé par le «Pourquoi pas» dans le chenal de Roosen, au nord de lile Casabianca a 129 métres de profondeur. ll e Le A , en E 9 "rl UN 0 A 3 ] peda e efi 9. ll Pa mm. dd ' CY 2 t TEN Y" " mi A h a í O A A o A ANALES DEL MuskEo NACIONAL DE BUENOS AIRES. 1); nat. Cuernos de ODOCOILEUS (HIPPOCAMELUS) ANTISENSIS (Orb.) TERCERA SERIE. T. XIV. LáÁm. Il. Cuernos de ODOCOILEUS (HIPPOCAMELUS) BISULCUS (Mo/.) CENA q IA b A ' DALÍ A Ala de co 0 A Ai dla de Er ecplensa a E ] E A A Ao ma a. Me ITA Ze pa ES ¿A AA E ol » > DA" us Ñ EA o e EA O . E 5 to - > =A a Ñ 4 ' pa O e , E a » É a , y d e] de 67 ' i y A ' ' d ¿E . AA 3 - - * 3 e J lA 7? E . + 5 "% » y > A A a se £ : . » e de a Li n 7 y n " fal * >. y A E , Po y ' Ñ ” 9 ll ] m ' sn e 4 - h E he A A 7] . ' a o ANALES DEL MuseEo NACIONAL DE BUENOS AIRES. | TERCERA SERIE, T. XIV. PLANCHE 1. De a ANALES DEL Museo NACIONAL DE BUENOS AIRES. , Uy NA | 7, » MIA PLANCHE IT. TERCERA SERIE, T. XIV. ANALES DEL MuskEo NACIONAL DE Buenos AIRES. JE Y PLANCHE TILL. EIN SERIE, TERCER ¡o O A TERCERA SerIk, T. XIV. —PLanchE 1V. MT, PO ANALES DEL Musgo NACIONAL DE BUENOS AIRES, E AA a , DO Y 'e e | Y E y TerCcERA SERIE, T. XIV. —PLaxcHE V. ANALES DEL Museo NACIONAL DE BUENOS AIRES. ¿en PES: le S : S A AR C 1 vs q 1" A” A $ e “Ae EN a EXA Y NN ru Ls ¿e Es yr 4 43 E el En es, K TL PLANCHE TERCERA SERIE, T. XIV. DE BUENOS AIRES. Museo NACIONAL ANALES DEL PLANCHE VII. XIV. TERCERA SERIE, T. ANALES DEL Museo NACIONAL DE BUENOS AIRES. TERCERA SERIE, T. XIV. PLANCHE VIII. á ANALES DEL Musgo NACIONAL DE Buenos AIRES, PO - Ms y : a 2: o >= A YT a ta LS A Ni - Y PLANCHE IX. TERCERA SERIE. T. XIV. ANALES DEL Museo NACIONAL DE BUENOS AIRES. abri: TA — PLANCHE X. TERCERA SERIE. T. XIV. AL DE BUENOS AIRES. 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