Avicennta
Revista de Ecología, Oceanología
y Biodiversidad Tropical
COMITÉ EDITORIAL
Universidad de Oviedo
Dr. Jesús Ortea
Dr. Germán Flor
Instituto de Oceanología
Dr. Juan Pérez
Dr. José Espinosa
Instituto de Ecología y Sistemática
Dr. Pedro Pérez
Dr. Alberto Coy
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La correspondencia debe ser enviada a:
Dr. Jesús Ortea
Dep. de Biología de Organismos y Sistemas
Laboratorio de Zoología
Universidad de Oviedo
33075 Oviedo. Asturias. España.
Portada: Mangle Rojo (Rhizophora mangle)
Revista de Ecología, Oceanología y Biodiver-
sidad Tropical
Volúmenes 12 y 13 (Oviedo, 2000)
Entidades patrocinadoras
Universidad de Oviedo. España.
Instituto de Oceanología. Cuba.
Instituto de Ecología y Sistemática. Cuba.
Publicación realizada dentro del Convenio de Colabora-
ción entre la Universidad de Oviedo y el Ministerio de
Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de Cuba
Dep. Leg. AS - 199/94
ISNN 1134 - 1785
Diseño y Maquetación: Jesús Ortea y Borja Ortea
Impreso en Loredo $. L. — Gijón
ÍNDICE
Avicennia, 12/13, 2000
Distribución de los octocorales en Majahual, costa de Quintana Roo, México
PANTEITORROCON NI: ARICA CON ZALEZ coin tpioaiosianinceicnrarosparacianocannncddancanin nadar anciana l
Aplicación de modelos estocásticos en la evaluación de hipótesis generadas por datos de avista-
mientos de mamíferos marinos
J. AxIs-ARROYO, D. TORRUCO, M. A. GONZALEZ Y B. MORALES-VELA.....coooncccocococonoconass 11
Nuevos registros para la ictiofauna marina de Cuba.
RODOLFO CLARO, RICHARD G. GILMORE, C. RICHARD ROBINS Y JOHN E. MCCOSKER............ 19
Composición y abundancia de la comunidad de aves terrestres durante la migración otoñal en la Pe-
nínsula de Hicacos, Matanzas, Cuba
HIRAM GONZALEZ; ESTEBAN:GODINEZ Y PEDRO BLANCO: 0ocooccccciinconccaconnnecónnconosnarincnanins 25
Definición, relaciones filogenéticas y grupos morfológicos de especies del taxon “Macromischa” (Hy-
menoptera: Formicidae: Leptothorax).
A CNA ALO RRE A A A 5,
El género Typhlatya (Crustacea: Decapoda) en Cuba, con la descripción de una nueva especie
AUGUSTO JUARRERO DE VARONA Y IMMANUEL ORTIZ rc cocoa naópqercdnincacónnos mo coacoraiencónaonnse 45
Una nueva especie de misidáceo marino del género Amathimysis Brattegard, 1969 (Mysidacea,
Mysidae), de aguas cubanas
MANUEL ORTIZ, ROGELIO LALANA Y ANNA SANCHEZ-DIAZ......ccooooccccooncccnonccccnoncccnnonnnccnnn 5
Una nueva especie de anfípodo espongícola del género Hoplopheonoides Shoemaker, 1956 (Gam-
maridea; Cyproideidae), de Cuba
MANUEL ORTIZ, ROGELIO LALANA Y ANNA SANCHEZ-DIAZ..ooocccoconoconinccnnococconanananocenannnnes 63
Los equinoideos (Echinodermata: Echinoidea) del Archipiélago cubano
MERCEDES ABREU, FRANCISCO SOLIS-MARIN Y ALFREDO LAGUARDA-FIGUERAS....ccoocccononos. 69
Nueva especie del género Janolus Bergh, 1884 (Mollusca: Nudibranchia) de Cuba y Costa Rica.
VEIS A OS A e AS A A 10
Nueva especie del género Okenia Menke, 1830 (Mollusca: Nudibranchia) de Cuba
ME OA O A A 84
Nueva especie del género Thuridilla Bergh, 1872 (Mollusca: Sacoglossa) de Cuba y Costa Rica
VE A A o E 87
Datos anatómicos de Prunum holandae (Mollusca: Neogastropoda: Marginellidae)
VS O O a a E 91
Descripción de un género y once especies nuevas de Cystiscidae y Marginellidae (Mollusca: Neo-
gastropoda) del Caribe de Costa Rica
NOSEIES PINOS AE SURE A Edi E E A tirada cdo dan area da 95
Nuevos registros de Neréididos (Polychaeta: Nereididae) para las Islas de Cabo Verde y Canarias
JORGE NUÑEZ, RODRIGO RIERA Y MARIA DEL CARMEN BRITO....occoocccncccnccnnocnnoccnioccnnanonos 115
Dos nuevas especies de cicadélidos (Homoptera: Cicadellidae) y registro del género Neocrassana
Linnavuori, 1959, para Cuba
A REI A RE SA 127
Notas breves:
Partenogénesis en Amblypygi (Arachnida)
A a A A 155
Primer registro de la familia Hahniidae (Arachnida: Araneae) para Cuba
RCA O e IR E NE e a A ea 135
Presencia de Chiridota rotifera (Pourtalés, 1851) (Echinodermata: Holothuroidea) en aguas del
Archipiélago Cubano
ROSA DEL VALLE GARCIA, FRANCISCO SOLIS-MARIN Y ALFREDO LAGUARDA..00cooocccconos. 137
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Avicennia, 2000, 12/13: 1-10
Distribución de los octocorales en Majahual, costa de Quintana
Roo, México
Octocorals distribution in Majahual, Ouintana Roo coast, Mexico
Daniel Torruco y M. Alicia González.
Centro de Investigación y Estudios Avanzados del 1.P.N. Unidad Mérida. Km. 6 Antigua
Carr. a Progreso. A. P. 73 CORDEMEX, Mérida, Yucatán, México.
Resumen
Se investigó la distribución y abundancia de 10 especies de octocorales de aguas someras.
Los estudios de zonación indican que, dentro del alcance del buceo SCUBA, hay tres zonas prin-
cipales en la costa de Majahual en el Caribe Mexicano. Los estudios indicaron que el princi-
pal factor que limita la distribución de los octocorales es la disponibilidad de substrato firme
conveniente para su asentamiento. La diversidad de octocorales depende de la diversidad del
substrato. El método de muestreo muestra que en algunas zonas, la distribución de los octo-
corales es en parches, reflejando así un patrón disperso de lugares convenientes para el esta-
blecimiento. Esta comunicación intenta describir y delucidar algunas de las características de
los factores físicos que controlan la organización de octocorales.
Abstract
The distribution and abundance of 10 species of shallow-water octocorals were investigated.
Zonation studies indicated that, within SCUBA diving range, there are three main zones in Ma-
jahual Caribbean coast of Mexico. Studies indicated that the main factor limiting the distribution
of the octocorals is the availability of the firm substratum suitable for the settling. Other fac-
tor are water movement and light. The diversity of the octocorals depends on the diversity of
the substratum. The sampling methods shows that, in some zones, the distribution of the oc-
tocorals is patchy, reflecting the scattered patterns of suitable settling sites. This paper at-
temps to describe and elucidate some the characteristics of the physical factors controlling
the octocorals organizations.
Palabras claves: octocorales, zonación, distribución, Caribe Mexicano.
Key Words: octocorals, zonation, distribution, Mexican Caribbean.
INTRODUCCIÓN
Los octocorales son miembros comunes y conspícuos de casi todos los arrecifes de co-
ral. A pesar de su frecuencia, la distribución y ecología de los octocorales es poco cono-
cida. La escasez de estudios ecológicos de alcionarios en el Caribe es atribuible a la difi-
cultad de identificar las especies en el campo, ya que en la mayoría de las ocasiones, la iden-
tificación debe ser realizada con base en muestras de espículas (escleritos) y aún con esta
estructura, se presentan variaciones dentro de las especies y de las colonias debido a fac-
tores del ambiente como la profundidad (KIENZIE, 1973).
Los gorgónidos han sido quizá la familia más investigada en estudios comunitarios den-
Torruco, D. y González, M. A.
tro de esta clase (GOLDBERG, 1973 y OPRESKO, 9173 para Florida; KIENZIE, 1973 y 1974
para Jamaica). En la parte Caribeña, para Belize se tienen los trabajos de MUZIK (1982);
LASKER Y COFFROTH (1983). En México, JORDAN Y NUGET (1978) han trabajado con po-
blaciones de Plexaura homomalla para conocer su uso potencial y su comercialización.
En relación a la influencia de los factores ambientales sobre esta fauna; además de
los anteriores, se ha estudiado, la influencia de la corriente en la forma de crecimiento y
orientación de varias especies (LABOREL, 1960; THEODOR AND DENIZOT, 1965; WAINWRIGHT
AND DILLON, 1969). Específicamente, estudios de zonación que involucran un gradiente
de profundidad fue dado por GOLDBERG (1973) para la costa sudeste de Florida, donde se
muestran evidencias de declinación de colonias grandes en ambientes de baja diversidad
y una mayor abundancia de colonias grandes en ambientes de alta diversidad.
A pesar de que las colonias de octocorales influyen en el hábitat, por el incremento de
abundancia y diversidad de los organismos asociados (MITCHELL ET AL., 1993), el distur-
bio afecta el abastecimiento, adquisición y retención de espacios de substrato para estos
organismos sésiles y consecuentemente puede jugar un papel muy importante en determinar
los patrones de zonación que pudieran presentar estas comunidades arrecifales, al origi-
nar sitios con diversas similaridades (YOSHIOKA Y YOSHIOKA, 1987). En este marco de
referencia, el objetivo del presente trabajo es realizar un acercamiento del patrón de zonación
de estos organismos y relacionar su abundancia en un gradiente batimétrico.
ÁREA DE ESTUDIO
La zona analizada corresponde a la localidad de Majahual, que pertenece a la parte oriental de
la Península de Yucatán (Fig. 1). Esta área corresponde a una plataforma calcárea plana y baja, cu-
bierto principalmente por vastas selvas tropicales y bordeado por las aguas del Mar Caribe con una
plataforma continental angosta. La costa presenta una alternancia de bahías, usualmente con playas
arenosas, puntas rocosas cárstificadas y un arrecife de barrera intermitente pero en algunos lugares
bien desarrollado. El clima es tropical con lluvia moderada, alta humedad, y temperatura relativa-
mente alta de forma casi constante (WARrD, 1974). La estación climatológica más cercana a Ma-
jahual es la de Carrillo Puerto, con 17 años de registros de precipitación y temperatura, cuyos va-
lores medios anuales son de 1518.7 mm, y 25.7 *C, respectivamente. Según la clasificación de
KOPPEN modificada por GARCIA (SPP, 1981), el clima es de tipo Aw2(x' )i que corresponde a cálido
subhúmedo con lluvias en verano, y más del 10.2% de lluvia invernal; isotermal, con oscilación
entre el mes más frío y el más cálido menor de 5 *C. Los vientos dominantes son de Noreste a Este
durante el invierno, con algunos Nortes; y de Sureste a Este en el verano. Tormentas tropicales y ci-
clones ocasionalmente azotan esta zona. La zona costera está dominada por factores ambientales ma-
rinos ya que el escurrimiento superficial es insignificante debido a la naturaleza cárstica del te-
rreno. La corriente oceánica superficial de Yucatán de 1 a 2.5 nudos de velocidad, fluye hacia el Norte
muy cercana a la costa debido a lo angosto de la plataforma continental. La variación máxima en la
marea en la zona de estudio es del orden de 0.3 m. La temperatura superficial del agua de mar va-
ría poco, entre un promedio de 25.6 en febrero, a 29 *C en agosto; la salinidad permanece muy
constante, con 35%o. MERINO (1986) sustenta estos valores reportando salinidad media del agua de
35.7%o, y temperatura media del agua de 27.7 *C, como típicas para esta región. No existen ríos en
el área, pero sí aportaciones de agua dulce al mar, a través de caletas y de surgencias de manantia-
les costeros y submarinos.
En el aspecto geológico, la zona de estudio es una planicie de origen marino, formada en su
totalidad por rocas de naturaleza calcárea, con edades que van del Plioceno (Formación Carrillo
Distribución de octocorales en Majahual
Puerto) a 1 Km al Oeste de la carretera 307, a Holoceno (dunas costeras) (LOGAN ET AL., 1969). El
arrecife de Majahual presenta zonas bien diferenciadas: Laguna arrecifal, arrecife anterior, arre-
cife posterior, zona frontal y plataforma arenosa. La laguna arrecifal tiene forma alargada, el fondo
es predominantemente arenoso, con inclusiones rocosas; los sedimentos acumulados están estabi-
lizados por Thalassia testudinum, distribuida en parches esparcidos, entre 60-90 cm de profundidad,
con algunas áreas bajas de hasta 30-40 cm que contienen arena gruesa y restos de coral. Entre es-
tas áreas y en el lado externo de las zonas de Thalassia se encuentran bancos de algas verdes calcáreas,
Halimeda sp, Udotea sp, Penicillus sp, y Rhipocephalus sp. y algas rojas coralinas ramificadas; la
anémona Stoichactis helianthus forma extensos manchones. Algunos escleractíneos como son:
Porites astreoides, P. porites, Diploria clivosa, y Siderastrea radians, se encuentran presentes.
El desarrollo del arrecife posterior en la zona de Majahual es incipiente, variando de parches de
15-30m. de largo, hasta pequeñas áreas coralinas. Ramas de Acropora palmata y cabezos de
Montastrea annularis vivos, están distribuidas a través de esta zona. Sobre el substrato crecen también
Punta
Herrero $
ahual
A Punta MA
Herradura ME
i Xahuachol [8
2 Punta [M
Gavilán HB!
BANCO
CHINCHORRO
XCALAK
Figura 1. Localización del área de estudio. Se muestra la posición de los puntos de muestreo.
Figure 1. Study area localization. The position of sampling points is shown.
Torruco, D. y González, M. A.
colonias de octocorales, siendo las dominantes Pterogorgias y Gorgonias de tamaño reducido, la pro-
fundidad en esta zona varía entre 1.5-2 m. Los parches arrecifales tienen un área de aproximadamente
4-6 m. de diámetro y están formados por una amplia variedad de corales escleractíneos, alcionarios,
esponjas y otros invertebrados; de los primeros se tienen además de las dos especies mencionadas,
Diploria clivosa, D. strigosa, Colpophyllia natans, Siderastrea radians, Porites porites, P. astreoides,
y Agaricia agaricites. Una amplia variedad de macroalgas completan la comunidad arrecifal cora-
lina en esta área. En esta área, se presentan quebrados pequeños o moderadamente anchos que per-
miten que el oleaje pase a la laguna, especialmente en el área norte.
La zona frontal en esta área se define como un continuo que va desde la rompiente hasta el
arrecife anterior, esta zona frontal de Majahual se caracteriza por una pendiente gradual rocosa,
con poco relieve o acumulación de arena entre la rompiente y los 10 m de profundidad. Esta pen-
diente de roca sólida tiene escasamente distribuidos, macroalgas, octocorales, y escleractíneos.
Después de los 15 m de profundidad, una verdadera cordillera arrecifal lineal de 15-30 m de ancho,
se extiende hacia el Noreste, paralelo a la zona de rompiente y a la playa. Este arrecife lineal tiene
cortes a través de él a intervalos irregulares, que sirven para el transporte de arena hacia la plataforma
arenosa a mayor profundidad. El relieve varía de 4-12 m, pero llega a alcanzar hasta 8 m en algu-
nos cabezos de coral. La diversidad es muy alta en este arrecife y exhibe 70-80% de cobertura de co-
rales hermatípicos. Esponjas, octocorales, y escleractíneos dominan la comunidad, las estaciones de
muestreo fueron realizados en esta área. La estación menos profunda se realizó muy cercana a la rom-
piente y la más profunda cercana al primer escalón arrecifal antes de caer al cantil.
La plataforma arenosa se localiza entre el arrecife frontal y el cantil. Consiste de arena acumu-
lada sobre la base de la pendiente del arrecife frontal y se caracteriza por ser una superficie de-
sierta colonizada parcialmente por algas verdes y algas calcáreas entre otras.
MATERIAL Y MÉTODOS
Los atributos de la comunidad de octocorales en la zona de Majahual, fueron determinados por
una serie de 6 campañas de muestreo que involucra el estudio desde 0.8 hasta 30 m de profundidad.
El muestreo se realizó mediante cuadrados de superficie conocida a lo largo de transecciones foto-
gráficas. En cada nivel batimétrico se tomaron series de registros fotográficos con una cámara Ni-
konus V desde una altura de 0.8 m y en dos líneas de 10 m marcadas cada 50 cm (LIDDELL Y OHL-
HORST, 1987; OLHORST ET AL., 1988). Cada cuadrado fotográfico cubre una superficie de 1 908 cm?
(53 x 36 cm) y se obtuvo un total de 576 imágenes. Además del muestreo fotográfico, se obtuvie-
ron representaciones de la fauna de alcionarios para efectuar una identificación precisa de cada una
de las especies que integran la comunidad, de tal manera que las interpretaciones se realizaron a la
máxima definición taxonómica posible. Cada fotografía fue seleccionada secuencialmente y sub-
muestreada en una pantalla (5 diferentes) de 37 puntos aleatorios. Los datos reportados aquí, son los
encontrados positivos para este grupo.
En el análisis numérico dela fauna, se utilizaron las siguientes técnicas de ordenamiento comuni-
tario: Análisis de Escalamiento Multidimensional (PIELOU, 1984) mediante el Escalamiento no-métrico
(KRUSKAL Y WIsH, 1978) y el Análisis de Correspondencias (GREIG-SMITH, 1971; HILL, 1973; WELLER
Y ROMNERY, 1979; JAMES Y MCCULLOCH, 1990) y Análisis BIPLOT (GABRIEL, 1981).
RESULTADOS
Las especies identificadas se presentan en la matriz de abundancia (Tabla 1). A pesar
de que la taxonomía de muchos alcionarios del Caribe es incierta, las identificaciones
fueron consistentes entre las muestras y no existieron colonias “problemas”.
A excepción del análisis BIPLOT que proporciona un escalamiento de los descripto-
res (las especies de octocorales), las técnicas usadas implican una reordenación de las
Distribución de octocorales en Majahual
profundidades en función de las interacciones de las especies. Los resultados numéricos
se presentan en la Tabla 2.
Escalamiento no-métrico. El análisis indica que las estaciones 2,6; 5,3 y 7,8 conforman
grupos con condiciones generales similares, mientras que las estaciones 1 y 4 son dos es-
taciones que presentan características diferentes. La primera agrupación (2 y 6) corresponden
a estaciones con profundidades de 5 y 21 m, cuya posible ordenación es debida a que
Briareum asbestinum se encuentra en ambas estaciones con alta densidad, independien-
temente de la profundidad. La segunda agrupación (5 y 3) con profundidades de 7.5 y
13.6 es posible que responda a la dominancia de la especie Pseudopterogorgia bipin-
nata, así como a la similitud entre la abundancia total y a la presencia de tres especies
de las 4 que presentan dichas estaciones. Las estaciones 1 y 4 difieren en general con las
otras estaciones por su baja densidad, aunque la profundidad de 10.6 m tiene una distan-
cia más cercana a la agrupación 2 y 6, el hecho de que se agrupen en el mismo eje, podría
ser por la especie Plexaura flexuosa, la cual muestra las densidades más altas en ambas es-
taciones. Es conveniente mencionar que para la dimensionalidad de este procedimiento,
la distorción fue de 0.77905 (Fig. 2A).
Análisis de correspondencias. Los puntos 7 y 8 están juntos indicando que hay poca dis-
tinción y hacen relación en este caso a la profundidad (28.6 y 30.3 m) y también a la es-
pecie Pseudopterogorgia americana. La relación entre 2 y 6 puede deberse más a su pro-
pia disimilitud y a la concurrencia de una sola especie Briareum asbestinum con abundancia
semejante (9 y 15 individuos); las especies restantes están presentes en una profundidad
pero no en otra o como el caso de Gorgonia flabellum que a pesar de estar presente en am-
bos sitios, su abundancia difiere fuertemente (33 y 3 individuos respectivamente). La si-
guiente agrupación involucra las estaciones 1, 3, 4 y 5, la inclusión de la estación 1
puede deberse a la presencia (y no a la abundancia) de Plexaura flexuosa y a la de Pseu-
dopterogorgia bipinnata; las estaciones restantes parecen poseer una relación más estre-
cha (menor distancia) ya que comparten 6 especies (Fig. 2B).
Análisis BIPLOT. El análisis sugiere que las especies: Pseudopterogorgia bipinnata
(7.5 y 13.6), Gorgonia flabellum (5) y Pseudopterogorgia americana (13.6, 28.8 y 30.3)
son especies que caracterizan ciertos estratos de profundidad; además el método propor-
ciona que por su abundancia son las especies más importantes dentro del análisis del gra-
diente de profundidad. La posición hiperdimensional de las profundidades está dada por
números mientras que las especies están definidas por letras (Fig. 3). La tabla de resulta-
dos se muestran en la misma figura.
DISCUSION
El ecosistema de los arrecifes de coral es bióticamente heterogéneo por muchas razones,
muchas discutidas por GRASSLE (1973). A pesar de que en un arrecife los corales son fre-
cuentes y quizá los predominantes, la distribución de ellos no es uniforme. Las zonas
arrecifales típicas es virtualmente un ejemplo de esto (LOYA Y SLOBODKIN, 1971; Ho-
PLEY, 1978; TORRUCO ET AL., 1989). Los corales ocupan grandes extensiones de los am-
Torruco, D. y González, M. A.
bientes arrecifales. El asentamiento de estos organismos en un ambiente en particular
está determinado principalmente por la dinámica física y química del hábitat, así como de
las interacciones bióticas que influyen sobre algunas circunstancias en la escala local.
Observaciones empíricas algunas de las cuales son resumidas aquí, implican que aún
un pequeño cambio en los factores controladores pueden cambiar el balance entre un
agrupamiento y otro. A una pequeña escala de análisis en Majahual, la cobertura de estos
organismos en ambientes de fondo duro es muy variable.
Algunos fenómenos biológicos como tasas de competencia, reclutamiento y depre-
dación, pueden enmascarar las diferencias entre las distintas áreas y por consiguiente
unir estos ecosistemas como menos aislados. Tales desigualdades pueden reunirse en
distintas organizaciones de especies en los diferentes ambientes lo que implica cierto
grado de dominancia que presentan elementos de uno u otro grupo, como sucede con al-
gunas profundidades en el arrecife, un esquema similar fue encontrado por YOSHIOKA Y
YOsHIOKA (1987; 1991) en Puerto Rico.
PROFUNDIDADES (m)
ALCIONARIOS 06. (34 13 10. 136, 12 ZE SOI
1 Bnareum asbestinum 0 9 7 2 19 45 2 0 54
2 Eunicea mammosa 0 0 5 2 7 5 17 be 40
3 Gorgona flabellur UNA 5 pa E 1 1 3 Z 0 52
4 Muncea muricata 0 3 3 8 8 0 0 9 31
5 Plexaura flexuosa 3 Oia 8 5 0 0 0 30
6 Plexaura dichotoma 0 0 1 2 2 0 0 0 5
7 Plexaurella grisea 0 3 0 1 8 1 5 0 18
8 Pseudopterogorgia americana 0 8 0 0 10 0 15 18 51
9 Pseudopterogorgia bipinnata 2 0:40:35 0 29 0 0 0 70
10 Pseudopterogorgia guadalupensis 0 1 0 0 1 0 0 0 2
TOMATE o! 25 5024: ¡38 30 353
Tabla 1. Densidad de octocorales en Majahual, costa del Caribe Mexicano.
Table 1. Octocorals density in Majahual, Mexican Caribbean coast.
ANALISIS DE CORRESPONENCIAS ANALISIS DE ESCALAMIENTO NO-METRICO
MODO Q MODO Q
COMPONENTE: DISTORCION: 0.7790616
I 111 0 COMPONENTE:
RAICES PROPIAS 0.44 0,35 0.22 I 10 mM
Estaciones (Profundidades) COORDENADAS RAICES PROPIAS 342:12.09, 1:64
1 (0.6 m) 205 105 162 Estaciones (Profundidades) COORDENADAS
2 (5 m) 052. 2 “UTE 1 (0.6 m) 0.65 0.34 -0.09
3 (7.5 m) -1.21 0.09 0.19 2 (5 m) -0,27 -0.5 -0.27
4 (10.6 m) -0.42 0.91 1.39 3 (7.5 m) 0.63 -00 0.5
5 (13.6 m) 0.33 0.4 -0.54 4 (10.6 m) 0.18 0.5 -0.82
6 (21 m) 0.19 -0.8 -235 5(136m) 0.33 -02 056
7 (28.8 m) 1.5 0.69 -096 6(21m) 0.19 -07 -191
8 (30.3 m) 1.75.:1.19. 146 7 (28.8 m) -0.57 0.35 0.44
8 (30.3 m) 0.310,56, 4.3
Tabla 2. Resultados numéricos del análisis de Correspondencia y Escalamiento no-métrico.
Tabla 2. Numerical results of correspondence and no-metric scaling analysis.
Distribución de octocorales en Majahual
De--
eo —
I
U
1
]
]
]
]
4
6
ESCALAMIENTO NO-METRICO — ANALISIS DE CORRESPONDENCIAS
Figura 2. Ordenación tridimensional de las estaciones de muestreo. A: Análisis de escalamiento
no-métrico y B: Análisis de correspondencias.
Figure 2. Tridimensional ordination of the sampling stations. A: non-metric scaling analysis and
B: correspondence analysis.
En zonas de la planicie arrecifal, donde el oleaje es vigoroso no existe un crecimiento
importante de corales blandos (DINESEN, 1983), debido a la muy alta energía de esta área
es posible que la diversidad de octocorales sea baja; y aún cuando Gorgonia flabellum es
localmente abundante, la mayoría del fondo está desierto, con una delgada capa de arena
y algas filiformes. La abrasión de la arena y los restos de coral en esta zona son un im-
pedimento distintivo para el reclutamiento o fijación de otro tipo de vida marina
(OPRESKO, 1972; RIEGL, 1995) y explica en parte la distribución presentada por este
grupo en profundidades con esta característica. Una relación causa efecto entre la es-
tructura de la comunidad y el disturbio físico es sugerido por el análisis, donde los prin-
cipales agrupamientos corresponden a biotopos relacionados con presiones del ambiente
como frecuencia e intensidad del oleaje, tasa de asolvamiento, protección a los vientos, etc.
Sin embargo, el amplio intervalo de distribución de muchos octocorales sugiere que algunas
especies son generalistas con amplios intervalos de tolerancia (TUNNELL ET AL., 1993).
Además, la distribución en parches es una de las formas más remarcadas de muchos al-
cionarios (BAYER, 1961), lo cual origina una alta variedad de la composición de especies
en diferentes localidades. Tal distribución espacial es resultado de una corta fase larval pe-
lágica y de un comportamiento gregario (BENAYAHU, 1985). El principal factor que li-
mita la distribución de alcionarios es la disponibilidad de substrato firme apropiado para
Torruco, D. y González, M. A.
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Distribución de octocorales en Majahual
Figura 3 (izquierda). Ordenación tridimensional de las estaciones de muestreo y de las especies
de alcionarios por el análisis BIPLOT. Se presenta el porcentaje de la varianza explicada en los
tres ejes de mayor importancia.
Figure 3 (left). Tridimesional ordination of the sampling stations and the alcyonaria species by
the BIPLOT analysis. It's presented the explained variance percentage in the three axes of grea-
ter importance.
el asentamiento larval, como es el caso de la porción norte de la laguna, la cual tiene un
proceso activo de asolvamiento. Por otra parte, la reproducción asexual, la cual es muy co-
mún en los corales blandos, causan desarrollo de agregaciones casi monoespecíficas, lo cual
lleva a fuertes magnitudes de competencias.
Los análisis realizados muestran una discontinuidad marcada que incluye algunas es-
pecies, como por ejemplo Pseudopterogorgia guadalupensis y Plexaura sp. Otras como
Briareum asbestinum, Eunicea mammosa, y Gorgonia flabellum están representados en
casi todas las profundidades, excepto en zonas muy someras y muy profundas del arrecife.
Parte de estos resultados pueden indicar simplemente que la complejidad del hábitat en los
diferentes biotopos o áreas críticas es relativamente alta, lo que proporciona una gran he-
terogeneidad en la distribución de las agrupaciones encontradas.
En estos conglomerados, existe una asociación de áreas intrínsecas muy semejantes. Se
identifican tres grandes similitudes. La primera incluye áreas someras cercanas a rom-
piente y a la laguna arrecifal. El segundo grupo, incluye profundidades medias en el arrecife
anterior y el tercer grupo, está identificado con áreas más profundas cercanas al cantil.
A pesar de que las medidas utilizadas representan un cierto grado de afinidad (WaAs-
HINGTON, 1984), ninguno de los métodos de ordenación utilizado es capaz de producir
una representación real y no distorsionada de las muestras (DEL MORAL, 1980), debido prin-
cipalmente a estructuras no lineales en los datos. Sin embargo, el objetivo principal de las
ordenaciones en nuestro caso de variaciones en la composición de las muestras y en los fac-
tores analizados (abundancia/profundidad), es una base para la generación de hipótesis
acerca de factores de control (GREIG-SMITH, 1971) y sobre todo de la estructura de zona-
ción presentada por la fauna de octocorales. De esta manera, podemos definir que para la
fauna de alcionarios y en la localidad estudiada, se presenta un patrón tal que la abun-
dancia y diversidad de esta fauna tiene su mayor expresión en profundidades medias y de-
crece en ambos sentidos. Es conveniente referirse a que estos organismos están fijos al susb-
trato y que su alimento lo obtienen directamente del medio. Por lo cual las condiciones óp-
timas se deben de dar en un intervalo que va desde 5 a 13.6 m, profundidades que po-
seen alta luminosidad y un oleaje moderado, que permite un recambio intenso de oxí-
geno y alimento.
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10
Avicennia, 2000, 12/13: 11-18
Aplicación de modelos estocásticos en la evaluación de hipótesis
generadas por datos de avistamientos de mamíferos marinos
Application of stocastic models in the hypothesis evaluation gene-
rated by watch data of marine mammals
Javier Axis-Arroyo*, Daniel Torruco*, M. A. González* y Benjamín Mo-
rales-Vela**.
* Centro de Investigaciones y de Estudios Avanzados del IPN, Unidad Mérida; Carretera
antigua a Progreso Km 6, C. P. 97310 A. P. 73 Cordemex, Mérida; Yucatán, México.
** El Colegio de la Frontera Sur, Unidad Chetumal. Zona Industrial 42 Carretera Chetu-
mal-Bacalar, C. P. 77000 A. P. 424 Chetumal, Ouintana Roo, México.
Resumen
En el estudio de poblaciones de mamíferos marinos, es común el uso de censos visuales
para la clasificación de las zonas de distribución de una especie; la secuencia de los resultados
de estos censos en el tiempo, puede ser considerada como un proceso estocástico. Al analizar
estos resultados en conjunto con otras variables mediante análisis multivariados, su ordenamiento
genera hipótesis donde los avistamientos son variables causales y/o de respuesta a n varia-
bles ecológicas, consecuentemente estas hipótesis pueden ser validadas por modelos estocás-
ticos. El modelo cadenas de Markov se aplicó para validar la hipótesis la cual postula que la
distribución espacial del manatí del Caribe depende de las variaciones drásticas en la intensi-
dad del viento. El modelo asignó una probabilidad de 0.40 de que aumente el número de ma-
natíes después de un cambio drástico en la intensidad del viento, de 0.56 de que disminuya y
de 0.04 de que no varíe. La validez del modelo dependerá del comportamiento de las variables
ecológicas analizadas en el tiempo, siendo válido si las variables analizadas tienen un com-
portamiento semejante entre años;.por lo tanto, la distribución de probabilidades tendrá un
valor de significación p igual al valor de análisis del comportamiento de las variables y el es-
tadístico asociado al valor p corresponderá al de la prueba de contrastación.
Abstract
In the population study of marine mammals, it”s common the censuses visual use for the
zones classification of species distribution; the results sequence of these censuses in the time,
could be considered like a stocastic process. Upon analyzing these results on the whole with
other variables by means of multivariate analysis, their ordination generates hypothesis
where they are causal variables and/or answer to n ecological variables, consequently these hy-
pothesis could be validated for stocastic models. The chains Markov model worked in order
to validate the hypothesis which it postulate that the spatial distribution of the caribbean
mannate relies on the drastic variations in the wind intensity. The model assigns a probability
of 0.40 that it increase the mannate number after drastic change in the intensity of the wind,
of 0.56 that it diminish and 0.04 of that it don't vary. The validity of the model will rely on the
behavior of the ecological variables analyzed in the time, being been worth if the analyzed va-
riables have a similar behaviour between years; therefore, the probability distribution a sig-
nificance value of p same to the value of the variables behaviour analysis and the associate sta-
tistic to the p value will correspond to the contrastation test.
Palabras claves: Cadenas de Markov, Procesos estocásticos, Manatí, Caribe Mexicano.
Key words: Markov”s chain, stocastic processes, mannate, mexican Caribbean.
11
Axis-Arroyo, J. et al.
INTRODUCCION
En ecología de comunidades los procesos sinecológicos, aun en las llamadas comu-
nidades clímax, son procesos con un nivel de incertidumbre asociado a ellos, pero que
pueden presentar un comportamiento en espacio y tiempo con un cierto grado de regula-
ridad (GAUCH, 1982; JONGMAN ET AL., 1987), esto permite describir a las variables gene-
radoras del proceso mediante un modelo probabilístico que las considere en forma cuan-
titativa y no cualitativamente. Cuando las variables que determinan un proceso sinecoló-
gico se observan en espacio y/o tiempo fijo y evolucionan en esas mismas dimensiones,
el proceso sinecológico es estocástico (LEGENDRE Y LEGENDRE, 1984).
En el estudio de poblaciones de mamíferos marinos, es común el uso de censos vi-
suales o de algún índice de abundancia basado en estos para la clasificación de áreas. La
presencia de individuos de una especie determinada en un espacio dado en el tiempo,
puede ser descrita fácilmente por un modelo probabilístico con variaciones temporales. En
este contexto, una secuencia de avistamientos en el tiempo puede ser considerada como
un proceso estocástico; si los datos de avistamiento se analizan conjuntamente con otras
variables mediante cualquier análisis multivariado, el ordenamiento de estas variables
generarían hipótesis sobre procesos en los que los avistamientos serán la variable causal
y/o de respuesta, en consecuencia estas hipótesis podrían ser validadas utilizando mode-
los estocásticos.
En 1906 se analizaron las variables que determinan el uso de hábitat del manatí del Ca-
ribe (Trichechus manatus manatus) en la costa oeste de la Bahía de Chetumal, Quintana
Roo, utilizando el análisis de dirección (AXIS-ARROYO, 1998). Este método multiva-
riado, evalúa mediante un modelo generalizado el total de relaciones causales que describen
un sistema, pero no las relaciones que se presentan entre las variables. Considerando
solo el ajuste de los valores de estas relaciones con la estructura de datos propuesta por el
modelo, los valores obtenidos de las relaciones entre variables no tienen robustez estadística
por sí solos, pero pueden generar hipótesis sujetas a comprobación.
En el presente trabajo se aplicará el modelo estocástico de cadenas de Markov para eva-
luar una hipótesis generada por el análisis multivariado, en el que los avistamientos de una
especie en un área son la variable de respuesta a n variables ecológicas.
MATERIALES Y MÉTODOS
Al analizar las relaciones entre las variables, una de las hipótesis obtenidas, fue que la
presencia de un manatí en áreas de aguas abiertas (sin resguardo), en dos de las tres tem-
poradas climáticas en la zona (nortes y secas), depende de las variaciones drásticas de la
intensidad del viento. Esta hipótesis será la que evaluaremos mediante el modelo esto-
cástico de cadenas de Markov, para lo cual utilizaremos los datos de los muestreos reali-
zados en los días con una intensidad del viento 25% mayor a la intensidad promedio del
mes, comparándolos con el muestreo inmediatamente anterior realizado en días sin va-
riaciones drásticas, durante los meses de octubre del 94 a junio del 95; en la Tabla 1 se re-
12
Evaluación de avistamientos de mamíferos marinos
portan los datos del número de manatíes avistados en el total de las áreas muestreadas y
que servirán como base para el presente análisis. Para el cálculo de las probabilidades de
transición los avistamientos entre muestreos se compararon por cada área y no en total.
Un proceso estocástico es un conjunto referido de variables aleatorias (Xt) en donde
el subíndice t toma valores de un conjunto T y Xt representa una característica medible en
el tiempo t (GNANADESIKAN, 1977).
Un proceso markoviano presenta las siguientes características:
a) Es un proceso discreto en el tiempo (t=0, 1, 2, ..., n). En nuestro caso, está definido
por cada uno de los muestreos.
b) Es un proceso con un número finito de estados mutuamente excluyentes. Consi-
derando que el parámetro de análisis es el avistamiento de animales, el proceso tendrá 3
posibles estados en relación al tiempo anterior:
- Mismo número de avistamientos (estado estacionario Pi).
- Aumento en el número de avistamientos (Pj).
- Disminución en el número de avistamientos (Pk).
c) Está gobernado por las probabilidades de transición Pij (el paso del estado 1 al j
está dado por la probabilidad Pij). La transición de estados se determinará por la proba-
bilidad de que se mantenga, aumente o disminuya el número de avistamientos entre los tiem-
pos t y t+1.
d) El estado j del proceso depende solamente del estado 1 y es independiente de la
historia del proceso. El estado en el tiempo 1 dependerá exclusivamente del número de avis-
tamientos registrados en el tiempo 1-1.
Muestreo Relación Muestreo Relación
entre entre
Anterior Posterior muestreos Anterior Posterior muestreos
5 3 Disminución 4 3 Disminución
5 12 Aumento 8 ] Disminución
da 6 Aumento 2 1 Disminución
4 2 Disminución 4 6 Aumento
7 6 Disminución 10 6 Disminución
7 12 Aumento 5 1 Disminución
4 1 Disminución 6 8 Aumento
8 3) Disminución l zo Aumento
g, 7 Sin cambio ] 3 Aumento
9 4 Disminución 2 3 Aumento
a 3 Disminución 4 ] Disminución
Tabla 1. Número de manatíes avistados en el total de las áreas muestrales, registrados antes y
después de variaciones drásticas en la velocidad del viento (>25% de la velocidad promedio de
los tres días anteriores).
Table 1. Mannati number watched in the all areas show them, registered befare and after drastic
variations in the wind speed (>25% average speed of the three previous days).
13
Axis-Arroyo, J. et al.
e) Tiene un conjunto de probabilidades iniciales P [(X0=1] para toda 1. El conjunto
de probabilidades iniciales de determinará por la diferencia entre el primer y segundo
muestreo.
Al plantear la evaluación de la hipótesis como un proceso Markoviano es conve-
niente especificar los dos conceptos básicos del comportamiento de un sistema en una
cadena de Markov:
a) Estado del sistema: Los valores que describen por completo la posición del sis-
tema en cualquier instante del tiempo son importantes para el comportamiento futuro del
sistema; en este caso, el número de avistamientos registrados en cada una de las áreas en
cada muestreo; b) La transición de estados (PROTTER Y MORREY, 1969). Al tratarse de
tiempos discretos la transición de estados son las variaciones en el número de avista-
mientos registrados entre los tiempos t y t ,, lo cual representará la evolución del sistema
en el tiempo.
A cada posible transición del estado i al j se asocia una probabilidad ES , que en pro-
cesos Markovianos se define como la probabilidad de transición de un paso, con valores
0
con componentes no negativos y sumatoria 1 y que tomará los valores de la siguiente
matriz:
P =[0.02 0.27 0.71]
Las diferencias entre los estados 2” y 3? y subsecuentes nos generaría la matriz de
transición asociada al proceso y que en nuestro caso sería:
0.00 0.37 0.63
P,=| 0.01 0.31 0.68
0.06 0.43 0,51
Por lo tanto, esta matriz modela las probabilidades de que se observe cualquiera de las
9 transiciones generadas por los 3 estados. Considerando el tiempo, estas probabilidades
de transición deben ser estacionarias para poder deducir la probabilidad de que el sis-
tema se encuentre en el estado j después de n transiciones, a partir del estado inicial i, lo
cual se denota por E lo cual es una probabilidad de transición de n pasos.
Para que el análisis del proceso Markoviano tenga sentido en el tiempo la matriz de tran-
sición deberá de cumplir con las siguientes propiedades:
1) Ser irreductible: que sea posible pasar del estado i al j en algún número finito de tran-
siciones para los estados 1 y j, esto es:
P. 20 para algún (n) para toda ij
15
Axis-Arroyo, J. et al.
2) Ser aperiódica: un estado i tiene un periodo t>1 si es posible para la cadena estar en
el estado i únicamente en múltiplos de t, es decir:
E = (); siempre que n no sea un múltiplo de t
Si una cadena markoviana es finita, irreductible y aperiódica es una matriz ergódica y
en consecuencia regular (MORRISON, 1976).
Cuando una cadena de Markov es regular la distribución probabilística tiene a una
distribución límite común conforme n aumenta, independientemente del estado inicial
en que empezó el proceso y se determina por:
e CES
límite, ¿,P,, Dil A
Donde p; satisface las ecuaciones del estado estable:
O
N
EII =1
yl
N
1-2 N
E
Esta última fórmula expresada en notación matricial toma la siguiente forma:
Mas
La probabilidad p, es la probabilidad del estado estable y representa las probabilida-
des de que el sistema se encuentre en cada estado al principio o fin de una transición,
después de que haya ocurrido un número lo suficientemente grande de ellas como para lo-
grar una estacionalidad en las probabilidades.
Considerando que:
La n-ésima potencia de la matriz P se denota como:
= (n)
P, as PP, )
El vector de distribución en el inicio del proceso es dado por:
A [X (nm), X,(m), ..., X(n)]
Evaluación de avistamientos de mamíferos marinos
Y el vector de distribución en el inicio del proceso es dado por:
X% = [X,(0), X,(0), ..., X(0)]
La relación entre los vectores de distribución en el n-ésimo periodo y en el inicio del
proceso se establecería por la fórmula siguiente:
x0) =X (0) p”
1
En consecuencia, la distribución de probabilidades en el estado límite es determinada
por:
X(% E X(0) E?
Donde:
X'” = Distribución de probabilidades del estado límite.
Xx” = Distribución de probabilidades en el inicio del proceso.
L = Matriz de transición límite.
En nuestro ejemplo X” toma los valores del vector P. y la matriz L los de la matriz P..
RESULTADOS
Los estados y posibles transiciones del sistema se especifican en el siguiente diagrama:
En donde:
Los círculos representan los estados.
i¡ = Mismo número de avistamientos.
j = Aumento en el número de avistamientos.
k = Disminución en el número de avistamientos.
Al aplicar la fórmula 2 se obtuvo la distribución límite de probabilidades:
X% =[0.04 0.04 0.56]
Lo cual representa que:
Hay una probabilidad 0.40 de que aumente el número de manatíes después de un au-
mento drástico en la intensidad del viento.
Hay una probabilidad de 0.56 de que disminuya el número de manatíes después de
un aumento drástico en la instensidad del viento.
17
Axis-Arroyo, J. et al.
Hay una probabilidad de 0.04 de que no varíe el número de manatíes después de un au-
mento drástico en la intensidad del viento.
DISCUSIÓN
El supuesto más crítico del proceso markoviano en la presente aplicación (y considera-
mos que en todas las aplicaciones en ecología), es la condición de la estacionalidad de las pro-
babilidades de transición; esto es, que su matriz P permanezca igual en todo el periodo.
Al considerar tal condición, la validez del modelo dependerá de las diferencias de las
variables ecológicas en el tiempo, que determinaron el proceso estocástico. Como en
este ensayo se consideraron las temporadas de Nortes y secas, el modelo describirá las po-
sibilidades de transición en tales temporadas y tendrá validez en el tiempo si las variables
analizadas tienen un comportamiento estable entre largos periodos.
Estadísticamente el modelo será válido si no existen variaciones significativas entre el
comportamiento del total de las variables en los tiempos t y t+1; por lo tanto, la distribu-
ción de probabilidades tendrá un valor de significancia p igual al valor del análisis del
comportamiento de las variables y el estadístico asociado al valor p corresponderá al de
la prueba que contrasta el comportamiento de las variables (Linares et al., 1986).
Si el comportamiento de las variables no tienen diferencias estadísticamente signifi-
cativas en el tiempo, las distribuciones de probabilidad serán las mismas. Si se presentan
diferencias, estas serán un indicador de perturbaciones en la dinámica del sistema y de esta
manera, el número de avistamientos tendrá un valor paramétrico que cuantifique las per-
turbaciones que ocurran en el medio.
Considerando las variables en forma individual, un estado tiene un valor probabilístico
generado por un conjunto de datos en los que tIT; por lo que las variaciones de cada t al-
teran el proceso estocástico, la estabilidad de las condicionantes causales de estado de-
penderán del apego de sus distribuciones a la distribución normal; sin embargo, la
misma naturaleza estocástica del modelo da un intervalo de tolerancia, por lo que consi-
deramos que una condicionante causal de estado es confiable si los datos de su distribu-
ción cumplen con el teorema de Tchebichev.
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New records for the marine ichthyofauna from Cuba
Rodolfo Claro', Richard G. Gilmore”, C. Richard Robins* y John E. McCosker'
1 Instituto de Oceanología, Avda. 1'* N”.18406. Playa, Ciudad Habana, Cuba.
2 Harbor Branch Oceanographic Institution Inc., E.U.A.
3 Universidad de Kansas, Lawrence, E.U.A.
4 Academia de Ciencias de California, E.U.A.
Resumen
Se relacionan 34 nuevos registros de peces marinos para la plataforma cubana, la mayo-
ría capturadas u observadas en el batial superior al sur de Cuba. Se colectaron y observaron en
total 476 especímenes de al menos 110 especies de peces en 29 inmersiones a bordo del su-
mergible Johnson-Sea-Link II, en el talud insular, desde 50 hasta 620 m de profundidad. Adi-
cionalmente se realizó una colecta con rotenona en aguas someras y colectas con jamo en los
arrecifes de 15 a 25 m de profundidad.
Abstract
34 new records of marine fishes for de Cuban shelf are presented, most of them colected
or observed on the upper batial at the south of Cuba. There were colected or observed 476 fish
specimens belonging to at least 110 species on 29 subdives on board of the sumersible John-
son-Sea-Link Il, along the insular slope from 30 to 620 m depth. Addicionally, one rotenone
station and some colections with nets were done in shallow waters and reefs from 15 to 25 m
depth.
Palabras clave: Nuevos registros, peces, Cuba.
Key words: New records, fishes, Cuba.
INTRODUCCION
Aunque la ictiofauna cubana ha sido relativamente bien estudiada desde Felipe Poey
hasta nuestros días (DUARTE-BELLO, 1959; DUARTE-BELLO Y BUESA, 1973; GUITART,
1974-1977; RODRIGUEZ, VALDÉSs-MUÑOZ Y VALDÉS, 1984; CLARO, 1994), los peces de
aguas profundas no han recibido igual atención, debido a las dificultades para su captura,
en particular aquellos de pequeñas tallas.
La posibilidad de utilizar tecnologías de avanzada, como el sumergible Johnson Sea
Link Il, de Harbor Branch Oceanographic Institution, nos permitió realizar colectas y va-
liosas observaciones de la fauna marina a todo lo largo del batial superior de la plata-
forma al sur del Archipielago Cubano. En este trabajo se relacionan las especies colectadas
u observadas, no reportadas anteriormente para la ictiofauna cubana. Unas pocas de las co-
lectadas no han podido ser identificadas aún, de las cuales probablemente 3 ó 4 sean es-
pecies nuevas para la ciencia.
19
Claro, R. el al.
MATERIALES Y METODOS
Se realizaron 29 inmersiones con el sumergible Johnson-Sea-Link Il, operado por el
barco de investigaciones Seward Johnson, a lo largo del talud insular del sur de Cuba,
desde las cercanías de Yateritas, al SE de Guantánamo, hasta Ensenada de Corrientes.
La mayoría de los especímenes fueron colectados con una resina de rotenona, di-
methyl-sulfoxide, y etanol inyectada en las cavidades rocosas con un sistema hidráulico,
Para colectar los peces, se empleó un equipo de succión que los trasladaba hasta unas cu-
betas de plástico numeradas colocadas sobre una plataforma giratoria. Antes de la captura,
los peces fueron observados y en muchos casos fotografiados con una cámara Benthos de
35 mm, con lente de 70 mm o con una cámara de vídeo digital Sony, ambas guiadas por
rayos láser y montada en una recamara hermética sobre un sistema móvil, dirigido desde
el módulo tripulado (una esfera de plástico transparente). Las operaciones del sumergible
se realizaron hasta una profundidad máxima de 620 m.
Adicionalmente, se realizaron colectas de peces con jamo en algunos arrecifes, hasta
25 m de profundidad, mediante buceo autónomo, y una colecta con rotenona en aguas
someras adyacentes a un manglar en Cabo Cruz.
Todos los peces colectados se encuentran depositados en las colecciones del Instituto
de Oceanología, en la Ciudad de la Habana. Unos pocos especímenes que no pudieron ser
capturados, fueron identificados por observación visual y documentados mediante foto-
grafías y video.
RESULTADOS
Se observaron en total 476 especímenes de peces pertenecientes a 60 familias y 110 es-
pecies, de los cuales al menos 34 especies no habían sido reportadas para la ictiofauna cu-
bana. De ellas, 25 fueron identificadas hasta la especie, las otras 9 se encuentran en pro-
ceso de identificación, de las cuales 3 ó 4 probablemente sean especies no descritas aún
para la ciencia. A continuación se relacionan los nuevos registros. La tabla 1 brinda las co-
ordenadas de las inmersiones en las cuales fueron capturados dichos peces.
Familia OPHICHTHIDAE
Myrophis platyrhinchus Breder, 1927. Un ejemplar de 155 mm largo total (LT) en el
estómago de un Polymixia lowei, capturado durante la inmersión 3064, al Sur de Cayo Ma-
tías, a 366 m de profundidad.
Familia NETTASTOMATIDAE
Nettenchelys exoria Bohlke y Smith, 1981. Un ejemplar de 255 mm LT en la inmer-
sión 3060, al sur de Cabezo Zambo, a 183 m de profundidad.
Familia SYNAPHOBRANCHIDAE
Atractodenchelys phrix Robins et Robins, 1970. Un ejemplar de 210 mm LT capturado
en la inmersión 3071, al sur de La Furnia, a 609 m de profundidad.
20
Nuevos registros de peces
Familia GONOSTOMATIDAE
Sonoda paucilampa Grey, 1960. Fueron observados dos ejemplares en la inmersión
3053, en el Banco de Jagua, a 460 m de profundidad, y otro en la inmersión 3060, al sur
de Cabezo Zambo, a 427 m.
Triplophos hemingi (McArdle, 1901). Se capturó un ejemplar de 145 mm largo es-
tandar (LE) en la inmersión 3071, a 569 m de profundidad y se observaron otros dos es-
pecímenes en el mismo lugar.
Familia OPHIDUDAE
Lepophidium kallion Robin, 1959. Un espécimen observado y fotografiado a 396 m en
la inmersión 3049.
Familia BYTHIDAE
Neobythites unicolor Nielsen y Retzer, 1994. En la inmersión 3050 se capturó un es-
pécimen de esta especie refugiado en el ósculo de una esponja cristalina (Margaritella
coeloptychiodes Schmitdt, 1880), a 371 m de profundidad. Otro espécimen, probable-
mente de otra especie de Bythidae, se colectó en la inmersión 3065, a 286 m, el cual no ha
sido identificado aún.
Calamopteryx goslinei Bohlke y Cohen, 1964. Se capturó un ejemplar de 110 mm
LE en la inmersión 3070 a 160 m de profundidad, y otro fue observado en la inmersión 3071
a315m.
Familia CHAUNACIDAE
Chaunax stigmaeus Fowler, 1946. Un ejemplar de 100 mm LE capturado en la in-
mersión 3044 a 439 m de profundidad.
Familia OGCOCEPHALIDAE
Ogcocephalus parvus Longley y Hildebrand, 1940. Un ejemplar de 195 mm LE cap-
turado en la inmersión 3050 a 258 m de profundidad.
Familia TRACHICHTHIDAE
Hoplostethus occidentalis Woods y Sonoda, 1973. Se observaron tres ejemplares en la
inmersión 3049 a 488 m de profundidad de los cuales se colectó uno de 1953 mm LE y otro
de 210 mm LE en la inmersión 3071, a 607 m.
Familia SYMPHYSANODONTIDAE
Symphysanodon berryi Anderson, 1970. Fueron observados 8 especímenes en la región
occidental del batial en las estaciones: 3053, 3056, 3061, 3069 y 3071 entre 249 y 430 m
de profundidad. Fueron colectados dos ejemplares en las estaciones 3053 (74 mm LE) y
3069 (68 mm LE).
Symphysanodon octactinus Anderson, 1970. Esta especie fue encontrada a todo lo
largo del batial, desde el sur de las provincias orientales hasta el extremo occidental (es-
taciones: 3041, 3050, 3054, 3056, 3061, 3065, 3069, 3071), entre 229 y 404 m. Se co-
24
Claro, R. et al.
lectaron ejemplares durante las inmersiones 3060 (uno de 115 mm LE, y otro de 126 mm
LE) , 3061 (un ejemplar de 100 mm LE).
Familia SERRANIDAE
Subfamilia Anthininae
Plectranthias garrupellus Robins y Starck, 1961. Se capturó un ejemplar de 74 mm LE
a 293 m de profundidad en la inmersión 3042
Pronotogrammus martinicaensis (Guichenot, 1368). Se observaron 8 ejemplares en la
inmersión 3069 a 196 m y uno a 177 m.
Subfamilia Liopropomatinae
Jeboehlkia gladifer Robins, 1967. Un ejemplar capturado en la inmersión 3071 a 183
m de profundidad, con una longitud de 39 mm LE.
Subfamilia Serraninae
Bullisichthys caribbeus Rivas, 1967. Se observaron dos ejemplares, en las estaciones
3044 (a 98 m) y 3063 (a 548 m).
Hypoplectrus gemma Goode y Bean, 1882. En una colecta con rotenona, realizada
cerca del manglar, en Cabo Cruz, a menos de un metro de profundidad, sobre fondo de Tha-
llassia, se capturó un ejemplar de 100 mm LE.
Familia GRAMMATIDAE
Lipogramma evides Robins y Colin, 1979. Se colectó un individuo de 74 mm LE, en
la inmersión 3070 a 202 m de profundidad, y se observó otro en la inmersión 3070 a 293 m.
Lipogramma robinsi Gilmore, 1997. Se colectó un ejemplar de 68 mm LE en la in-
mersión 3069 a 293 m de profundidad.
Familia EPIGONIDAE
Epigonus spp. Se observaron 37 ejemplares de este género, no registrado antes para
Cuba, (en las estaciones: 3042, 3052, 3053, 3060, 3061, 3065 y 3067), entre los 385 y
567 m de profundidad, de los cuales se capturaron 28 pertenecientes al menos a dos especies
diferentes, las cuales no han sido identificadas. Fueron estas las más frecuentes entre las
especies demersales encontradas.
Familia LUTJANIDAE
Pristipomoides aquilonaris Goode y Bean, 1896. Se capturó un ejemplar de 57 mm LE
en la inmersión 3071 a 366 m. Ejemplares de esta especie fueron identificados visual-
mente y mediante fotografías, en las estaciones: 3041, 3244, 3050,3053 y 3060, a pro-
fundidades entre 314 y 488 m.
Familia GERRIDAE
Eucinostomus melanopterus (Bleeker, 1863). Un ejemplar de 90 mm LE capturado
con rotenona en la cercanía del manglar, a un metro de profundidad.
22
Nuevos registros de peces
Familia CHAETODONTIDAE
Chaetodon guyanensis Durand, 1960. Fueron observados 3 ejemplares de esta especie
en la inmersión 3065, y uno en la 3071. En la primera, fué capturado un ejemplar ( 72 mm
LE) a 192 m de profundidad.
Familia LABRIDAE
Polylepion sp. Se capturó un ejemplar de este género, no registrado para Cuba, con una
longitud de 60 mm LE, en la inmersión 3054, a 289 m de profundidad, y se observó otro
en la inmersión 3060 a 293m. Se trata de una nueva especie, colectada por Grant Gil-
more en Bahamas, que se encuentra en proceso de descripción por dicho autor.
Familia PERCOPHIDAE
Bembrops sp. Fueron colectados dos individuos no identificadas de este género, tam-
bién nuevo registro para Cuba, que parecen ser de diferentes especies, uno de 110 mm LE,
en la inmersión 3049 a 490 m de profundidad y otro en la 3075 a 260 m (66 mm LE).
Ambos especímenes están siendo identificados por el Dr. Bruce Thompson de la Uni-
versidad Estatal de Louisiana.
Chrionema sp. En la inmersión 3062, a 260 m de profundidad, se capturó un ejemplar
de este género, tampoco registrado anteriormente para Cuba, con una longitud de 130
mm LE el cual se encuentra en poder de Grant Gilmore para su identificación.
Chrionema squamentum Ginsburg, 1955. Se capturó un ejemplar en la inmersión
3054, a 224 m con una longitud de 70 mm LE.
Familia GOBIIDAE
Gobiosoma louisiae Bohlke y Robins, 1968. Un ejemplar de 43 mm LE fue captu-
rado en la inmersión 3044 a 113 m.
Varicus sp. Se colectó un ejemplar de este género a 168 m en la inmersión 3069, con
una longitud de 33 mm LE. Durante una inmersión de buceo en los arrecifes de Cayo
Rosario, a 15 m de profundidad, se capturó otro ejemplar de 27 mm LE, del mismo género,
que parece ser de otra especie. Ambas especies fueron colectadas antes por Grant Gil-
more en Bahamas y las Antillas, pero aún no han sido descritas.
Familia TRICHIURIDAE
Benthodesmus tenuis (Gunther, 1877). En la inmersión 3049 se observaron tres ejem-
plares, a profundidades entre 485 y 497 m, de los cuales uno fue capturado (de 353 mm
LE). En la inmersión 3054 a 425-450 m se observaron varias decenas de ejemplares de esta
especie.
Familia PLEURONECTIDAE
Poecilopsetta sp. Un ejemplar no identificado de este género fue colectado en la in-
mersión 3049, a 538 m de profundidad, con una longitud de 96 mm LE el cual se en-
cuentra en proceso de identificación.
23
Claro, R. el al.
AGRADECIMIENTOS
Los autores dejan constancia de su agradecimiento al Discovery Channel (E.U.A)
por el financiamiento de la expedición, y en particular a los organizadores de la misma, Sr.
All Giddings y Jim Lipscomb.
BIBLIOGRAFIA
CLARO, R. 1994. Características generales de la ictiofauna. En R. Claro (ed.) Ecología de los peces marinos de
Cuba. Instituto de Oceanología y Centro de Investigaciones de Quintana Roo, México, pp 55-142.
DuaARTE-BELLO, P. P. 1959. Catálogo de peces cubanos. Univ. Cat. STo. Tomás de Villanueva, Lab. Biol.
Mar., Monografía, 6: 208 pp.
DuARTE-BELLO, P. P., Y BUESA, R. J. 1973. Catálogo de peces cubanos. Ciencias, Univ. Hab., Invest. Mar.,
Ser. 8(3):1-255.
GUITART MANDAY, D. 1974-1978. Sinopsis de los peces marinos de Cuba. Vol. IV, 881 pp.
RODRIGUEZ, A., VALDÉS-MUÑOZ, E. Y VALDÉS, R. 1984. Lista de nombres científicos y comunes de peces ma-
rinos cubanos (nomenclator). Centro de Investigaciones Pesqueras, La Habana: 82 pp.
Fecha N.L Localidad Latitud Longitud Prof. m Min-Max.
9Dic. 3041 E. Yaterinas 19:56.2383 N 76:45.4449 W 107-171
10 Dic. 3042 S. Turquino 19:55.7343 N 76:46.5166 W 222-459
11 Dic. 3044 Bajo Mandinga 19:56.4075 N 76:23.9236 W 23-462
11 Dic. 3045 Bajo Mandinga 19:56.4676 N 76:23.9909 W 57-454
16 Dic. 3050 Cayo Anclitas 20:48.3712 N 78:58.1749 W 152-372
MD 3052 Banco de Jagua 21:34.0403 N 80:37.7866 W 488-600
Dic... 3093 Banco de Jagua 21:34.1119 N 80:37.8360 W 459-600
18 Dic. 3054 Cayo Rosario 21:36.2136 N 81:52.2212 W 183-484
19 Dic. - 3056 Cayo Cantiles 21:30.8657 N 82:02.7516 W 46-368
21 Dic. 3060 Cabezo Sambo 21:31.4220 N 82:16.5400 W 183-452
22 Mic "3001 Cabezo Sambo 21:283039 N 82:14.5706 W 208-431
ZAC ISE Cabezo Sambo 21:28.1045 N 82:14.3069 W 45-452
23"Dica 5063 Cayo Matías 21:31,5159 N 82:27.7441 W 104-613
23 Dic. 3064 Cayo Matías 21:31.5118 N 82:27.7345 W 18-610
24 Dic. 3065 Cocodrilo 21:30.0872 N 83:06.6367 W 15-464
26 Dic... 3067 Cabo Francés 21:35.9288 N 83:11.2386 W 502-543
27 Dic. 3069 Cayos Los Indios 21:47.0333 N 83:14.1838 W 30-373
28 Dic. 3070 La Furnia 21:55.5079 N 84:05.4643 W 17-163
29 Dic. 3071 La Furnia 21:55.0993 N 84:05.2240 W 151-612
31 Die :3075 María la Gorda 21:46.7132 N 84:31.4529 W 91-442
Tabla 1. Ubicación de las inmersiones donde fueron colectados los nuevos registros de peces
utilizando el sumergible Johnson-Sea-Link Il, en el batial superior al Sur del Archipiélago Cu-
bano. (N.I. = Número de inmersión).
24
Avicennia, 2000, 12/13: 25-34
Composición y abundancia de la comunidad de aves terrestres
durante la migración otoñal en la Península de Hicacos, Matan-
zas, Cuba
Composition and abundance of terrestrial bird's community du-
ring fall migration in the Peninsula of Hicacos, Matanzas, Cuba
Hiram González, Esteban Godinez y Pedro Blanco
Instituto de Ecología y Sistemática, Carretera de Varona, Km 35 A.P. 8010, C.P. 10800,
Habana 8, Cuba.
Resumen
En la Penísula de Hicacos, donde existen formaciones vegetales de los tipos matorral xe-
romorfo y bosque sublitoral, se realizó un trabajo de inventario, captura y anillamiento de
aves residentes y migratorias en los períodos de migración otoñal de Octubre de 1989 y
1990. Se capturaron 323 aves migratorias neárticas y 99 residentes permanentes pertenecien-
tes a 32 especies. La Tasa de captura fué de 49,99 aves/100 horas-red. Las especies migratorias
más capturadas fueron la Caretica (Geothlypis trichas) (533) y la Candelita (Setophaga rutici-
lla) (36), mientras que para las residentes permanentes fueron el Juan Chiví (Vireo gundlachii)
(35) y la Tojosa (Columbina passerina) (24). La información obtenida confirma que esta re-
gión de Cuba constituye un área importante de refugio, alimentación y descanso de las aves ne-
árticas durante la migración.
Abstract
A bird banding and survey field work was carried out at different vegetation formations
of Peninsula de Hicacos, during the fall migration of 1989 and 1990. It was captured 323 ne-
artic migrant birds and 99 permanent residents belong to 32 species. The capture rate was of
49,99 birds/100 net-hours. Yellow through Warbler (Geothlypis trichas) (53) and American
Redstar (Setophaga ruticilla) (36) were the migrant species of higher captures while as Cuban
Vireo (Vireo gundlachit) (35) and Common Ground Dover (Columbina passerina) (24) were
the permanent resident species. The information confirm that this region is an important ne-
artic bird's area of Cuba for feeding, resting, refuge during the migration period.
Palabras claves: Abundancia, aves, ecología, migración.
Keys words: Abundance, birds, ecology, migration.
INTRODUCCION
En las regiones tropicales la influencia de las aves migratorias es muy alta debido a la
cantidad de especies y de individuos que migran todos los años a las mismas.
La destrucción de los ecosistemas forestales ha sido muy grande desde el pasado siglo
y cada año las aves encuentran menos hábitats disponibles para su refugio, alimentación
y nidificación, por lo que es necesario desarrollar investigaciones encaminadas a la con-
servación de los hábitats y sus comunidades de aves (KEAST Y MORTON, 1980).
25
González, Godínez y Blanco
La mayoría de las investigaciones sobre comunidades de aves residentes y migratorias
en algunas áreas tropicales se han llevado a cabo durante períodos de residencia (ASKIN,
EWERT Y NORTON, 1992; LyncH, 1992) basándose en inventarios, captura con redes or-
nitológicas y anillamientos.
En Cuba, diferentes autores (AGUAYO, 1937; BRUNER, 1938a; 1938b; 1939; 1940;
GaRRIDO Y GONZALEZ, 1980) realizaron observaciones y registros de aves migratorias.
Trabajos posteriores han aportado datos sobre el estado, distribución y clasificación de
las aves en Cuba (GARRIDO Y GARCIA, 1975; GARRIDO, 1988). Otros estudios han contri-
buido a conocer la distribución y abundancia de las poblaciones en diferentes hábitats y
regiones de la Isla (BEROVIDES, GONZALEZ E IBARRA, 1982; GONZALEZ, 1982; ACOSTA Y BE-
ROVIDES, 1984).
Con estos antecedentes nos propusimos analizar la composición, abundancia y actividad
de la comunidad de aves en un matorral xeromorfo costero y un bosque siempreverde
micrófilo de la Península de Hicacos en el período de migración otoñal.
MATERIALES Y METODOS
El trabajo se desarrolló entre el 14 y el 19 de octubre de 1989 y del 16 al 20 de octubre de
1990 correspondientes al período de migración otoñal, en Rincón Francés, Península de Hicacos, en
la costa N de la Provincia Matanzas (Fig. 1). Se emplearon 12 redes ornitológicas de 9 y 12 m con
30 mm de paso de malla.
Las redes se colocaron en las estaciones A y B. La primera ubicada dentro del matorral xeromorfo
costero y el bosque siempreverde micrófilo, donde la vegetación era mas tupida y la segunda en el
borde de la misma vegetación con un hábitat mas abierto (Fig. 1).
PUNTA HICACOS a
Rincon Frances
K
xx lx
xx
ATA Xx XY
O XX XxX Xx
ER XX X XX XX
XXX XXX
a XXX XX
PST XxX
X
LEYENDA
H— Redes ornitológicas
--- Transceptos liniales
2 Matorral xeromorfo subcostero y] Escala:1:20000
pork bosque
siempre verde microfilo
ES Manglar
hi Carretera
Ao a
Figura 1. Mapa de la región de estudio. Figure 1. Map of the study region.
26
Migración de aves en Península Hicacos
Las capturas se realizaron entre las 6:00 y las 12:00 horas del día, con excepción de 3 días del
primer año donde se capturaron hasta las 17:00 horas.
Para los cálculos con relación a las capturas, se uniformó el diseño de ambos períodos de mues-
treos, considerando las aves capturadas hasta las 12:00 horas y las redes de 9 m como la unidad, mien-
tras las de 12 m como 1,33. En 1989 se emplearon 537,49 horas-red y en 1990 420,49 horas-red.
Las aves capturadas se identificaban, y se medían los diferentes caracteres morfológicos; ade-
más, se le colocaban un anillo metálico enumerado de Bird-Banding Fish and Wildlife Service. Se
determinaba el sexo y la edad cuando era posible y se anotaba la red y la hora de captura; poste-
riormente se liberaban en el área.
Los cálculos de captura en porcentajes para las principales especies se realizaron sobre la base
de la tasa de captura (aves/100 horas-red) para uniformar la información en ambos períodos.
Para el cálculo de la densidad (aves/ha) se utilizó el método de transepto lineal (BLONDEL,
1969; EMLEN, 1971). Se marcaron 2 transeptos de 720 y 500 m con 20 m de ancho donde se contaron
todas las aves vistas u oidas en el horario de la mañana, en las mismas áreas donde se colocaron las
redes ornitológicas.
Los valores de densidad se compararon con las tasas de captura (Aves/100 horas-red) de las
20 especies mas abundantes mediante un análisis de correlación de Spearman y la ecuación de re-
gresión correspondiente a los datos transformados por rangos. Para los inventarios se tuvieron en
cuenta las aves detectadas en conteos y capturas, asi como las observadas en el área de estudio.
Las especies de aves se clasificaron en residentes permanentes (RP), residentes invernales (RI)
y transeúntes (T) de acuerdo con los criterios de GARRIDO Y GARCIA (1975) y GARRIDO (1988).
Los gremios alimentarios utilizados fueron: carnívoros (C), carnívoros aéreos (CA), granívoros-
frugívoros (GFr.), nectarívoros (N), insectívoros aéreos (IA), insectívoros de tronco (IT), insectívoros
de percha (IP), insectívoros-frugívoros (IFr.) e insectívoros de follaje (IF), según los criterios de AL-
FONSO, BEROVIDES Y ACOSTA (1988).
Los tipos de vegetación presentes son mayormente xerofíticas, constituidas por comunidades ve-
getales adaptadas a las condiciones climáticas, halinas y edáficas imperantes.
A continuación, describiremos los tipos de vegetaciones donde se desarrollaron los muestreos:
Matorral xeromorfo costero y subcostero (Manigua costera): Se desarrolla sobre rendzinas cos-
teras de la llanura carsificada de la península, así como sobre los escarpes de antiguas terrazas ma-
rinas. La estructura de esta vegetación se encuentra determinada no sólo por las condiciones edáficas,
sino también por el ambiente halófito y la acción de los vientos, de forma que en las zonas de ma-
yor exposición, el matorral adquiere una fisionomía achaparrada y su composición florística se ca-
racteriza por una mayor abundancia de elementos espinosos, micrófilos y de suculentas (C.
Chiappy, comunicación personal.)
Bosque siempreverde micrófilo: Esta formación en la península se encuentra condicionada por
varios aspectos: la profundidad del suelo, la extensión superficial y el factor antrópico, el cual ha ori-
ginado una considerable degradación en dicha formación. No obstante, en las zonas mejor conser-
vadas, este bosque presenta un estrato arbóreo de 5-7 m conformado por especies como Lysiloma
latisiligua (soplillo), Hypelate trifoliata (cerillo), Metopium brownei (guao de costa), Cordia ge-
rascanthus (baría) y Burcera simaruba (almacigo). El estrato arbustivo es denso y el estrato herbáceo
es generalmente ralo (C. Chiappy, com. pers.)
RESULTADOS Y DISCUSION
En los muestreos realizados en el área de estudio se capturaron 326 aves migratorias
y 102 residentes permanentes con 17 y 3 recapturas respectivamente (Tabla 1). Estas
aves pertenecen a 22 especies migratorias neárticas y 10 residentes que crían en Cuba.
Por las cantidades de aves capturadas por especie en los períodos muestreados (Tabla
1) se determinó que 8 de las especies migratorias son las que se destacan en la utiliza-
ción de esta región al arribo a Cuba durante su migración.
27
González, Godínez y Blanco
Estación A Estación B
Especies Migratorias Neárticas 1989 1990 1989 1990 Totales
Mniotilta varia 16(4) 7(1) 0 l 24(5)
Setophaga ruticilla 14(3) iZ 0(1) 10 36(4)
Dendroica discolor 130) 6 Z 5 26(2)
Dendroica caerulescens 6 11 l 4 71)
Dendroica palmarum 28(1) 4 13501) 8 IZ)
Dendroica cerulea 2 2
Dendroica magnolia 4 e l 0 8
Parula americana 0 2 ] ] 4
Geothlypis trichas 17 23 5 18(1) 65(1)
Seiurus aurocapillus 100) 8(1) l 2 21(2)
Seirus noveboracensis + l 5
Helmitherus vermivorus l l
Polioptila caerulea l 2 3
Vireo olivaceus l ] 2
Vireo griseus ] 301) 2 6(1)
Vireo philadelphicus l l
Passerina cyanea 4 5 9
Passerina ciris 3 ] 4
Dumetella carolinensis 2 16 10 28
Catharus ustulatus ] ]
Catharus fuscescens 2 l 3
Guiraca caerulea 2 2
Subtotal 11611) 1146) 24(2) 1200 326(17)
Especies Residentes Permanentes
Teretistris fernandinae el 5 l l 14
Vireo gundlachii 16 21 3
Tiaris olivacea 6 111) 7(1)
Mimus polyglottos 3 Ze 5
Xiphidiopicus percussus l l 2 4
Columbina passerina 11(1) 6(1) 1 6 24(2)
Saurothera merlini l l 2
Contopus caribaeus l 1
Myiarchus sagrae 5 2 7
Chlorostilbon ricordii ] ]
Subtotal Ss) 39(2) e 9 102(3)
Aves capturadas 168 153 26 81 428
Aves recapturadas 12 5 2 l 20
Tabla 1. Aves capturadas y recapturadas por especie, estación y año. ( ) Aves recapturadas en el
mismo período de muestreo.
Table 1. Birds captured and recovered by specie, station and year. ( ) Birds recovered in the
same period.
28
Migración de aves en Península Hicacos
Si tenemos en cuenta los inventarios realizados en este trabajo en el área de estudio (Ta-
bla 2), se determinó que en ella habitan 16 especies residentes permanentes (38,09%) y pa-
san O permanecen 19 residentes invernales (45,24%) y 7 transeuntes (16,67%). El ma-
yor número de capturas correspondieron a residentes invernales en los dos años mues-
treados (1989: 70,1%; 1990: 76,5%). Por otra parte, las capturas de residentes perma-
nentes y transeúntes invernales están menos representadas.
Esto significa que el área, durante el período de migración otoñal estudiado, es muy im-
portante para las aves migratorias neárticas terrestres porque sostiene un gran número de
especies (61,91%) y de individuos (76,17%).
En 1989 las mayores capturas correspondieron a la Bijirita Común (Dendroica pal-
marum) (43), la Caretica (Geothlypis trichas) (22), la Bijirita Trepadora (Mniotilta va-
ria) Q0), la Bijirita (Dendroica discolor) (17) y la Candelita (Setophaga ruticilla) (18);
mientras que en 1990, la Caretica (44), el Zorzal Gato (Dumetella carolinensis) (26) y
la Candelita (22) fueron las mas abundantes durante el período muestreado.
Si tenemos en cuenta ambos períodos, las especies migratorias mas abundantes fueron
la Caretica, la Bijirita Común y la Candelita, mientras que para las residentes permanen-
tes sobresalieron el Juan Chiví (Vireo gundlachii), la Chillina (Teretistris fernandinae) y
la Tojosa (Columbina passerina).
De las 8 especies más abundantes, siete coinciden con las más capturadas en la Ciénaga
de Zapata, durante dos períodos de residencia invernal (GONZALEZ ET AL., 1992). Ade-
más, se encontraron otras especies que son comunes a las dos regiones, como son el Hal-
cón Peregrino (Falco peregrinus) y el Halcón de Palomas (Falco columbarius).
Teniendo en cuenta la ubicación geográfica de la Península de Hicacos, con respecto
a la Ciénaga de Zapata, nuestros resultados indican que una parte de las aves que pasan
su residencia invernal en la región situada al S de la provincia de Matanzas, pudieran
utilizar a la región que se encuentra al N como primera área de arribo, refugio y alimen-
tación en su migración a Cuba. En estudios posteriores mediante la recuperación de las aves
anilladas y la utilización del radar (GODINEZ Y MARTINEZ, 1991; GODINEZ, REGUERA Y
HERRERA, 1991) se podría confirmar esta hipótesis.
Se capturaron individuos de 3 especies transeúntes consideradas raras para Cuba
(GARRIDO Y GARCIA, 1975): El Tordo de Espalda Olivacea (Catharus ustulatus), el
Tordo Acanelado (Catharus fuscescens) y el Azulejón (Guiraca caerulea).
De las 42 especies reportadas, la mayor cantidad pertenece a diferentes gremios de
la categoría insectívoros (66,66%) (Tabla 2); de ellas 21 (50%) son especies migrato-
rias. De éstas, las mayores cantidades (85,58%) correspondieron a insectívoros y muy
pocas a granívoros-frugívoros (4,6%). FAABORG Y TERBORG (1980) plantearon esta
misma situación para otras islas del Caribe, relacionándolo con la disponibilidad de recursos
alimentarios. Opinamos que esto pudiera deberse a la fenología de las plantas de dife-
rentes tipos de vegetación en el trópico, donde la formación de semillas y la fructificación
concluye de forma general en septiembre y no comienza hasta la primavera del siguiente
año (R. Herrera y A. López, com. pers.) lo cual se observó en la zona de estudio, mientras
que la disponibilidad de insectos y arácnidos debe ser mayor, a pesar de su posible dis-
minución en los meses mas fríos.
29
González, Godínez y Blanco
Nombre Vulgar Nombre Científico Cat. Residencia Gremio Trófico
Halcón Peregrino Falco peregrinus RI E
Halcón de Palomas Falco columbarius RI E
Cernícalo Falco sparverius RP a
Gavilán Bobo Buteo platypterus RP €
Paloma Rabiche Zenaida macroura RP GFr
Paloma Aliblanca Zenaida asiatica RP GFr
Tojosa Columbina passerina RP GFr
Barbiquejo Geotrygon chrysia RP GFr
Arriero Saurothera merlini RP CP
Zunzún Chlorostilbon ricordii RP N
Carpintero Verde Xiphidiopicus percussus RP EX
Bobito Grande Myiarchus sagrae RP IP
Bobito Chico Contopus caribaeus RP IP
Pitirre Guatibere Tyrannus caudifasciatus RP IP
Golondrina de Arboles Tachycineta bicolor RI IA
Golond. Cola de Tijera Hirundo rustica Tí IA
Sinsonte Mimus polyglottos RP IFr
Zorzal Gato Dumetella carolinensis RI [Fr
Tordo Dorso Oliváceo Catharus ustulatus dE TFr
Tordo Acanalado Catharus fuscescens Y [Fr
Rabuita Polioptila caerulea RI IF
Vireo de Ojo Blanco Vireo griseus RI IF
Vireo de Ojo Rojo Vireo olivaceus E IF
Vireo de Filadelfia Vireo philadelphicus Ti IF
Juan Chiví Vireo gundlachii RP IF
Bijirita Gusanera Helmitherus vermivorus RI IF
Bijirita Trepadora Mniotilta varia RI in
Bijirita Chica Parula americana RI IF
Bijirita Magnolia Dendroica magnolia RI TE
B. Azul Garganta Negra Dendroica caerulescens RI IF
Bijirita Azulosa Dendroica cerulea AE IF
Bijirita Dendroica discolor RI IF
Bijirita Común Dendroica palmarum RI IF
Señorita de Monte Seiurus aurocapillus RI IS
Señorita de Manglar Seiurus noveboracensts RI IS
Caretica Geothlypis trichas RI IF
Chillina Teretistris fernandinae RP IF
Candelita Setophaga ruticilla RI HE
Azulejón Guiraca caerulea T GFr
Azulejo Passerina cyanea RI GFr
Mariposa Passerina ciris RI GFr
Tomeguín de la Tierra Tiaris olivacea RP GFr
Tabla 2. Lista de las especies de aves terrestres observadas y capturadas en Península de Hicacos.
Table 2. List of bird terrestrial species watchers and captures in the Peninsula of Hicacos.
Abreviaturas (Abreviations): C: carnívoro (carnivore), CP: carnívoro de percha (perch carnivore), GF: graní-
voro-frugívoro (granivore-frugivore), 1F: insectívoro de follaje (foliage insectivore), IT: insectívoro de tronco
(trunk insectivore), 1P: insectívoro de percha (perch insectivore), YEr: insectívoro-frugívoro (insectivore-frugi-
vore), TA: insectívoro aéreo (aerial insectivore), N: nectarívoro (nectarivore), RI: residente invernal (winter
resident), RP: residente permanente (permanent resident), T: transeúnte invernal (winter transeunt)
30
Migración de aves en Península Hicacos
1989 1990
Est. A" Est B-- Total EstiA” Est B'' Total Totales
Aves capturadas 135 25 178 UÑA 80 233 411
Aves recapturadas 12 0 12 5 | 6 18
Totales 165 25 190 158 81 239 429
N? de especies 24 10 24 26 19 28 32
Horas-red 323,64 “78,00 401,64 305,90 114,77 420,49 822,13
Tasa de captura
(aves/100 h-r) PRAT A USDON 4432 150.02 769,70* 33,41 "149,99
Tasa de recaptura
(aves/100 h-r) 37 0 TO 1,63 0,87 1,43 219
Recaptura (%) 27 0 6,31 3,16 1:23 2 4,19
Tabla 3. Datos generales de las aves capturadas en la Península de Hicacos por estación y año
entre las 6:00 y las 12:00 horas.
Table 3. General data of the birds captured in the Peninsula of Hicacos by station and year bet-
ween 6:00 and 12:00 hours.
Los insectívoros de follaje (IF) fueron los más representativos en especies (15)
(35,71 %) y en individuos capturados (53,5%) sobre todo bijiritas migratorias.
Entre las 6:00 y las 12:00 horas del día se capturaron 411 aves y se recapturaron 18 per-
tenecientes a 32 especies (Tabla 3). La Tasa general de captura fue de 49,99 aves/100
horas-red, la cual es similar (43 aves/100 horas-red) a la obtenida durante los mismos
períodos para la localidad de Gibara que se encuentra situada al N de la región oriental de
Cuba (RODRIGUEZ ET AL., 1991). Sin embargo, estos valores son superiores a los presen-
tados por GONZALEZ ET AL. (1992) para períodos de residencia de las aves en 1988 (0,19
aves/horas-red) y 1989 (0,12 aves/horas-red) en una localidad de la Ciénaga de Zapata. Si
además tenemos en cuenta la cantidad de especies que pasan por esta localidad y que la tasa
de recaptura para Hicacos (2,19 aves/100 horas-red) es baja, podemos concluir que esta re-
gión es un punto importante de entrada y tránsito de aves migratorias.
Las Tasas de captura fueron similares para ambos años en la estación A (Tabla 3), mien-
tras en la B en el segundo año fue muy superior al anterior. La cantidad de especies en la
estación B fue inferior que en la A.
Los valores de la Tasa de captura por día se comportaron de forma diferente en los dos
años para los primeros 4 dias, ya que en 1989 fue aumentando, aunque hubo un pequeño
descenso en el segundo día con respecto al primero. En 1990, después de un incremento
sustancial en el segundo día cuando se capturaron 72 aves, la curva fue descendiendo
hasta el final.
Las mayores Tasas de captura en los primeros dos dias de 1989 correspondieron a
Setophaga ruticilla, Dendroica discolor y Dendroica palmarum. En el tercer día hubo
un aumento por la entrada de numerosas aves de Geothlypis trichas. Del cuarto al sexto
día hubo un fuerte arribo de D. palmarum, Mniotilta varia, S. ruticilla y Dendroica cae-
rulescens.
31
González, Godínez y Blanco
En los cuatro primeros días de 1990 las mayores capturas correspondieron a D. cae-
rulescens, S. ruticilla, G. trichas y Dumetella carolinensis. En el quinto día, la mayor
migración fue de G. trichas y D. caerulescens.
La densidad en el transepto 1 (25,46 aves/ha) fue mayor que en el transepto 2 (19,00
aves/ha) (Tabla 4) y además el primero fue más rico en especies detectadas. Algunas es-
pecies son más abundantes en la vegetación mas cerrada (transepto 1) como son la Chi-
llina y la Tojosa, mientras la densidad de la Bijirita Común es mayor en el borde de la ve-
getación donde la formación boscosa es mas abierta. La densidad promedio del área para
este período fue de 22,48 aves/ha.
Al comparar los valores de densidad con las tasas de captura de 20 especies, la co-
rrelación fue altamente significativa (r = 0,73089*%**) con una ecuación de regresión lineal
positiva (Y = 2,8141 + 07320X). Esto indica estadísticamente (coeficiente de determi-
DENSIDAD
Especie Transepto 1 Transepto 2 XxX Tasa de captura
T. fernandinae 4.39 =-- 2.64 1.43
D. palmarum 0:23 5.50 2.34 2.85
D. caerulescens 0.69 1.00 0.82 31D
D. discolor 0.69 1.00 0.81 2.62
S. ruticilla 0.93 2.00 1.36 523
G. trichas 3.70 3.50 3.62 10.23
P. americana 0.23 --- 0.14 0.71
S. aurocapillus 0.69 1.00 0.82 2.38
S. noveboracensis --- 0.50 0.20 1.19
V. gundlachii 3.24 2.00 21D 4.76
P. cerulea 0.46 --- 0.28 0.48
T. olivacea 1.85 =-- 1.11 0.24
P. cyanea --- 1.50 0.60 2.14
D. carolinensis 0.69 0.50 0.62 6.18
M. polyelottos 0.93 =-- 0.56 0.48
T. caudifasciatus 0.23 --- 0.14 =--
C. passerina 2.08 0.50 1.45 2.89
G. chrysia 0.23 --- 0.14 ---
S. merlini 0:23 --- 0.14 0.24
X. percussus 0.69 --- 0.42 =--
F. columbarius 0423 --- 0.14 =--
Totales 25.46 19.00 22.48 55.41
Tabla 4. Densidad (Ind/ha) y Tasa de captura (Aves/100 horas-red) por especie en dos transeptos
de la Península de Hicacos en 1990.
Table 4. Density (Ind/ha) and capture rate (Birds/100 net-hours) by species in two transects of
the Peninsula of Hicacos in 1990.
32
Migración de aves en Península Hicacos
nación = 53,42 %) la relación de las capturas de las diferentes especies con la abundancia
de las mismas en el ecosistema.
Entre las 6:00 y las 10:00 horas del dia se capturaron las mayores cantidades de aves
para ambos años y se destaca el horario entre las 7:00 y las 7:59, lo cual está relacionado
con la actividad trófica que desarrollan las aves, fundamentalmente en las primeras horas
del día.
En este tipo de hábitat, con una vegetación muy baja (2-3 m) y cerca de la costa, pu-
dimos apreciar que la temperatura se eleva considerablemente después de las 10:00 horas
del día y esto debe influir en la actividad y captura de las aves.
En 1989 se dejaron abiertas las redes durante 3 tardes y sólo se capturaron 17 indivi-
duos para una baja tasa de captura de 11,0 aves/100 horas-red.
Todos estos resultados le conceden al matorral xeromorfo costero y al bosque siem-
preverde micrófilo de esta región una gran importancia para la conservación de muchas
especies migratorias de bosque que utilizan dichas formaciones vegetales cuando arri-
ban a Cuba y de algunas especies residentes.
CONCLUSIONES
- El matorral xeromorfo costero y el bosque siempreverde micrófilo de la Península de
Hicacos es utilizado al menos por 19 especies residentes invernales y 7 transeúntes en
su migración a Cuba. Además habitan 16 especies residentes permanentes.
- Las bijiritas (Aves: Emberizidae) son las especies más abundantes en su migración
por la región de la Península de Hicacos, destacándose la Caretica (Geothlypis trichas) y
la Bijirita Común (Dendroica palmarum).
- Los insectívoros son los mas frecuentes (66,66%) y en particular los insectívoros
de follaje que aportan la mayor cantidad de individuos (53,5%).
- La Tasa de Captura Total fue de 49,99 aves/100 horas-red.
- La mayor actividad de las aves se desarrolla entre las 6:00 y las 10:00 horas del día.
AGRADECIMIENTOS
A los compañeros Eugenio Pérez, chofer del Instituto de Ecología y Sistemática y
Rolando Trujillo, especialista del IPF de Matanzas por habernos ayudado en el trabajo
de campo. Al compañero José Finales de Marina Gaviota por su apoyo logístico en el
trabajo y a Octavio Babilonia por las ilustraciones.
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Definition, phylogenetic relationships and morphological spe-
cies groups of taxon “Macromischa” (Hymenoptera: Formici-
dae: Leptothorax).
Definición, relaciones filogenéticas y grupos morfológicos de es-
pecies del taxon “Macromischa” (Hymenoptera: Formicidae:
Leptothorax).
Jorge Luis Fontenla Rizo
Museo Nacional de Historia Natural, Obispo 61 esq. Oficios, CP 10100. La Habana, Cuba.
Abstract
It is determined that arboreal and limestone-dweller species of Antillean Leptothorax
conform a monophyletic group, named Macromischa, defined as the least inclusive clade
that includes £. sallei and L. myersi, but not £. isabellae. The following morphological species
groups are defined and diagnosed: Arboreal species: sallei, squamifer (subgroups squamifer
and splendens), gibbifer, purpuratus, punicans. Limestone-dweller species: versicolor (sub-
groups iris, porphyritys, versicolor). The Puerto Rican arboreal species, £. isabellae, is the Ma-
cromischa's sister taxon. This more inclusive clade is named Macromischamorpha.
Resumen
Se determina que las especies arborícolas y carsifílicas de Leptohtorax de las Antillas
conforman un grupo monofilético, nombrado Macromischa, definido como el clado menos in-
clusivo que incluye £. sallei y L. myersi, pero no L. isabellae. Se definen y diagnostican los si-
guientes grupos morfológicos de especies. Arborícolas: sallei, squamifer (subgrupos squami-
fer, splendens), gibbifer, purpuratus, punicans. Carsifílicos: versicolor (subgrupos iris,
porphyrytis, versicolor). La especie arborícola de Puerto Rico, £. isabellae, es el taxon hermano
de Macromischa. Este clado más inclusivo es nombrado Macromischamorpha.
Key words: Ants,Leptothorax, Macromischa, phylogenetic analysis.
Palabras claves: Hormigas,Leptothorax, Macromischa, análisis filogenético.
INTRODUCTION
All of the Antillean Leptothorax, along with a group of species from Central America
and the South of the United States, were placed in the genus ad hoc, Macromischa Roger,
1863, until BARONI-URBANT'S (1978) revision. He defined 12 species groups within the for-
mer Macromischa and treated it as a subgenus, with ambiguous limits and possibly
polyphyletic, of Leptothorax. SNELLING (1986) synonymized formally the taxon, and this
is the most accepted general consideration so far (BOLTON, 1994, 1995).
Within the Antillean Leptothorax, which conforms the richest group, both in species
number and endemism, of all of the Antillean ants, 1t can be distinguished three general
ecological species groups: a) terricolous: built their nests on soil. b) arboreal: built their
nests in epyphytes, fallen trunks, holes in the trees or making a cartoon nest in the bran-
35
Fontenla, J. L.
ches. c) limestone-dweller: built their nests in crevices of limestone, making a cartoon
tubular entrance. This is an unique trait among ants.
The species in the arboreal and limestone- dweller groups exhibit a heterogeneous
arrangement of traits like bizarre morphology and sculpturation and unusual color pat-
terns. This, together with the singular nesting behavior of the limestone-dweller species,
makes all of them one of the most remarkable group of ants in the whole world.
The purpose of the present paper is to define and to determine, through a phylogene-
tic analysis, a possible natural taxon as well as morphological species groups within the
Antillean Leptothorax
MATERIAL AND METHODS
Taxa. There were analyzed the 47 species of Antillean Leptothorax. It was followed
the taxonomic arrangement of BARONI-URBANI (1978), with later modifications and/or
additions Of SNELLING (1986) and FONTENLA (1997, 1998). It was not possible to exa-
mine specimens of £. ciferrii, L. pulchellus, L. creolus and L. praecreolust. Characters se-
lection and measurements of these species were taken from BARONI-URBANI (1978) for the
extant taxa and from ANDRADE (1992) for the fossil species. The rest of the species were
examined from the following collections: Cuba: Instituto de Ecología y Sistemática, Mu-
seo Nacional de Historia Natural. USA: American Museum of Natural History, Museum
of Comparative Zoology at University of Harvard, National Museum of Natural History.
Characters. There were selected 52 morphological and one ecological-behavioural cha-
racters from workers (Appendix 1). Exclusive characters for particular species were not
considered in the phylogenetic analysis (Appendix 3). Multistated characters were treated
as unordered.
Polarization and outgroups. Polarization was made through an unconstrained and si-
multaneous analysis, as part of the cladistic performance. It was selected as prime outgroup
Cardiocondyla emeryti. This genus is very close to Leptothorax (BOLTON, 1982; FRAN-
COEUR AND LOISELLE, 1988). C. emeryi is a widespread and very well known species
with a conservative morphology. The second outgroup was Leptothorax acervorum, the
type species of the genus, sensu BOLTON (1982, 1995).
Phylogenetic analysis. It was employed PAUP 3.1.1 program (SwoFFORD, 1993).
Tree search was made by branch swapping together with tree bisection and reconnec-
tion. The choice of the final hypothesis of relationships was made after the application of
successive weighting with the rescaled consistency index. Assumptions and comments
of this method of reducing solutions in CARPENTER (1988, 1994) and EGGLETON AND
VAN-WRIGTH (1994). Tree manipulation and edition with MacClade version 3.05 (Map-
DISON AND MADDISON, 1995).
Pylogenetic definitions. 1 follow here the approach to phylogenetic definitions sustained
by SHANDER AND THOLLESSON (1995), MICHAEL (1995, 1998) and DOMINGUEZ AND WHE-
ELER (1997), instead of the traditional approach (DE QUEIROZ, 1996, 1997 and referen-
ces therein). They do not consider ancestry-descendant relationships as part of the phy-
logenetic definitions. For population level definition I follow DE QUEIROZ (1992).
36
Filogenia del taxon Macromischa
RESULTS AND DISCUSSION
Cladistic analysis yielded 952 equally parsimonious trees (EPT) with Length (L)=
239 steps, Consistency Index (CI)= 0.28 and Retention Index (RI)= 0.78. After successive
weighting, solutions were reduced to 2 EPT with Cl= 0.52 and RI= 0.91. Strict consensus
tree (Fig. 1) shows a clade (*) whose species share the following characters states: 24(0),
33 (1,2), 34(1), 35(1), 301), 53 (1,2). This clade includes all of the original species of
Macromischa. L. isabellae is its sister group, sharing characters states 24(0), 34(1),
53(1). L. praecreolust is the sister taxon of this more inclusive clade, sharing character state
34(1), and probable 53(1), according to the most probable parsimonious reconstruction. The
terricolous species conform the BARONI-URBANIS”S (1978) allardycei, creolus, pastini-
fer and pulchellus morpho-logical groups. The pulchellus group appears to be polyphyletic
(Composition of Baroni-Urbani's 1978 groups in Appendix 2).
In an attempt to refine the phylogenetic relationships of the arboreal + limestone
dweller clade, it was removed the terricolous group and added to the root its sister species.
The characters states were properly recodified when needed. The new performance pro-
duced 166 EPT with L= 183, CI 0.33 and RIZ0.74 . Successive weighting resulted in one
tree (Fig. 2); with CI=0.61 and RÍE 0. 88. Manipulation with MacClade did not reveal
any shorter alternative tree topology.
Bootstrap majority-rule consensus tree (Fig. 3) shows support above 50% for all the
branches. Generation of 10 000 random trees from the data matrix produced a tree frecuency
between 363 and 480 steps, with a mean value of 433.1 steps. This indicates that the
most parsimonious reconstruction (183 steps) 1s very far from a chance solution and so the
data contain a strong phylogenetic signal.
The arboreal + limestone dweller clade of Antillean Leptothorax can be named Ma-
cromischa. The meaning of this name is to point to a natural (monophyletic) group of
species within the genus Leptothorax, which has evolved in a very specific biogeograp-
hical context: Cuba and the Hispaniola, producing two ecological and morphological
well defined species groups. Macromischa can be defined (stem-based) as: the least in-
clusive clade that includes £. sallei and L. myersi, but not L. isabellae. The more inclusive
clade composed by Macromischa and its sister taxon, £L. isabellae, can be named as Ma-
cromischamorpha and defined (node-based) as: the least inclusive clade that includes L.
isabellae and Macromischa. Morphological species groups of Macromischa (named ac-
cording to nomenclaturial priority).
1.Salleí. Definition: The least inclusive clade of Macromischa that includes £. sallei
and L. laetus. Composition: £. bruneri, L. dissimilis, L. laetus, L. hispaniolae, L. salei. Diag-
nosis: Arboreal species of medium size, slender constitution and straight profile. Club
differentiated, scapes thin and short. Propodeal spines long. Petiole long, node square
and high. Postpetiole broader than long. Femora medium. Femorae and tibiae inflated.
Tegumentary sculpturation mainly longitudinal.
BARONI-URBANI (1978) included within his sallei group six species from Mexico and
Central America. Cladistic analysis produced 40 EPT with L= 255, CI=0.26, and Rl=
0.69. Successive weighting gave a single tree (ClI= 0.40, RIE 0.80), which shows these spe-
37
Fontenla, J. L.
cies as not belonging to Macromischa (Fig. 4).
2. Squamifer. Definition : The least inclusive clade of Macromischa that includes L.
squamifer and L. splendens. Composition: Squamifer subgroup: L. platycnemis, L. barbouri,
L. creigthoni, L. squamifer. Splendens subgroup: £. violaceus, L. splendens, L. darlingtoni,
L. abeli. Diagnosis: Arboreal species of big and medium size. Curvilinear or straight
profile. Scapes thick and short. Propodeal spines present. Node scale shaped, high and
broader than long. Postpetiole broader than long. Femora medium. Femorae and tibiae
inflated. Tegument with iridiscent or metallic reflections. Squamifer subgroup. Spines
long. Petiole long or very long; node broader than the postpetiole. Splendens subgroup. Pro-
notum and mesonotum broad. Propodeal spines and petiole short. Femora with small tu-
bercles.
3. Gibbifer. Definition: Types specimens of £L. gibbifer Baroni-Urbani, 1978 and all ot-
her organisms relationed to those organisms through interbreeding to form an inclusive po-
pulation level lineage. Composition: £L. gibbifer. Diagnosis: Arboreal species of small
size. Massive constitution and curvilineal profile. Club differentiated; scapes thick and short.
Propodeal spines short. Petiole short; node rounded and high, with no anterior face and bro-
ader than long. Postpetiole broader than long. Femora medium. Femora and tibiae infla-
ted. Tegument with iridescence. Reticulated sculpturation.
4. Purpuratus. Definition: The least inclusive clade that includes £. alayoi and L.
purpuratus. Composition: £. alayoi and L. purpuratus. Diagnosis: Arboreal species of
slender constitution. Club differentiated; scapes thick and short. Propodeal spines pre-
sent. Petiole very long. Node rounded and very low, with no anterior face, longer than
broad. Postpetiole longer than broad. Femora and tibiae inflated. Head with iridiscent te-
gument.
5. Punicans. Definition: Types specimens of £L. punicans Roger, 1863 and all the ot-
her organisms relationed to those organisms through interbreeding to form an inclusive po-
pulation level lineage. Composition: £. punicans. Diagnosis: Arboreal species of big size
and sinuous profile. Club differentiated; scapes thick and short. Propodeal spines absent.
Petiole long, node rounded, low with no anterior face, longer than broad. Tibiae no inflated.
Postpetiole longer than broad. Mesosoma punctuated and longitudinal striated.
6. Versicolor. Definition: The least inclusive clade of Macromischa that includes £. iris,
L. porphyrytis and L. versicolor. Composition: Iris subgroup: L. gundlachi, L. wheeleri,
L. barroi, L. iris, L. senectutis. Porphyrytis subgroup: L. mortoni. L. nipensis, L. villa-
rensis, L. banao, L. myersi. Versicolor subgroup: L. versicolor, L. bermudezi, L. poeyi. Diag-
nosis: Slender constitution, club poorly differentiated, scapes thin and long or very long.
Petiole long or very long; node rounded, longer than broad. Postpetiole longer than
broad (except in L. myersi). Tibiae no inflated. Iris subgroup: scapes surpassing CL in
less than 140%. Propodeal spines absent. Petiole long. Femora medium. Tegument with
iridiscent and/or metallic reflections. Porphyrytis subgroup: scapes surpassing CL in less
than 140%. Propodeal spines long or very long. Petiole long or very long. Femora long.
Versicolor subgroup: Scapes surpassing CL in more than 140%. Pronotum oblong. Pro-
podeal spines absent. Petiole long. Femora long.
38
Filogenia del taxon Macromischa
$ 3 ES y E É se £ 2 L Lg g 5 3
E 233 L2255: 5e255 Tu tS52- E BE 2 EEE. 8.3
E PRE Ad PRE
GE555IBla Ser EaS SL ona ¿naa oE>s oe amn=20-2=>
Figure 1. Strict consensus tree of the phylogenetic relationships of Antillean Leptothorax. Con-
sistency Index= 0.52, Retention Index= 0.91. Species in bold characters: outgroups.
Figura 1. Árbol de consenso estricto de las relaciones filogenéticas de Leptothorax antillanos.
Indice de Consistencia= 0,52, Indice de Retención= 0.91. Species in bold characters: outgroups.
m
E 7)
. pi pu [0») E - 17) o
v (>) N “E ne Est (7) DD y Ni
PESO = o25 E_sz 2Z20z-= = 2 5% e] D
vu O IO OQ i5So 2 V0z*“0 DICO E FS no)
O VEGO ELO OO IAE AAA =0cS 5 0 S
ARINE02 2022 D05ES33030808 coc 2gRle=2
y S*“ec200509=3209502708%0€ A a o 000
¡RES 2IILD OASIS Soo 05=57090
UN A=30% 059 >000000%500n02059>0E 952. E£E0>0ÉE>200
Figure 2. Phylogenetic relationships of phylogenetic taxon Macromischa. Consistency Index=
0.60, Retention Index= 0.88. Species in bold characters: outgroups.
Figura 2. Relaciones filogenéticas del taxon filogenético Macromischa. Indice de Consistencia=
. 0.60, Indice de Retención= 0.88. Species in bold characters: outgroups.
Fontenla, J. L.
isabellae
praecreolus
C. emeryi
acervorum
dissimilis
bruneri
laetus
sallei
hispaniolae
gibbi fer
platycnemis
barbouri
squami fer
creightoni
violaceus
splendens
darlingtoni
abeli
purpuratus
alayoi
punicans
gundlachi
wheeleri
iris
barroi
senectutis
versicolor
poeyi
bermudez i
nipensis
mor toni
porphyritis
5 villarensis
7 banao
57: myersi
Figure 3. Bootstrap majority-rule consensus tree of Macromischa.
Figura 3. Árbol de consenso de la mayoría de análisis de Bootstrap de Macromischa.
Species in bold characters: outgroups.
m
3 4 o n ses
¡el v Ú a = ae 2 E 17) LD y A N
» Oo 3 ES nc E = 5 KE h =- lo] o
99590, 28 42._ 2-3¿382 2525 ess . 222 E DS
E =35 =%ETZEGO C053900 S EZ. 15 8462.- Go Zo == 2
ESor gocen ose oa05c= 2855022990 ostaniosn7ۃ
vVEEVAIL ZAS RADO OASIS eo oe a5E 0 ES EDS
EY ox 2 2220000797730 0553>5£029220= a)
UA i23 380 -=o0oL5co>030 72007 5o0oaa3 3: o E ZTERB>0EÉ >0.0
Figure 4. Cladistic relationships among continental species Of BARONI-URBANIS'S (1978) sallei
group and Macromischa. Consistency Index= 0.40, Retention Index= 0.80.
Figura 4. Relaciones cladísticas entre las especies continentales del grupo sallei, sensu BARONI-
URBANI (1978) y Macromischa. Indice de Consistencia= 0.40, Indice de Retención= 0.80.
Species in bold characters: outgroups.
40
Filogenia del taxon Macromischa
ACKNOWLEDGMENTS
My gratefulness to Rare Center for Tropical Conservation of Philadelphia, USA, for
the finantial support. To Drs. E. O. Wilson and D. Smith for the loan of specimens and ot-
her facilities, and also to S. Cover. To my colleagues at the MNHNC for their criticisms.
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41
Fontenla, J. L.
Appendix 1. Characters and codification.
Apéndice 1. Caracteres y codificación.
1. CW/CL £ 75% (0), CW/CL > 75% (1). CW: Cephalic width. CL: Cephalic lengtír.
2. Antennal club: little differentiated (0), well differentiated (1).
3. Number of segments in the club: 3 (0), 4 (1).
4. Shape of funiculum segments: rounded (0), rectangular (1).
3. Scape: thick (0), thin (1)!
6. Scape: short (0), long (1), very long (2).
Short: do not surpass CL, long: surpassing CL less than 140%, very long: surp1551ng
more than 140%.
7. Size: small (0), medium (1), big (2).
Small <35 mm, medium > 3.5 mm < 5.0 mm, big > 5.0 mm.
8. Profile : stra1gth (0), curvilineal (1), convex (2), sinuous (3).
9. Pronotum shape in profile: no oblong (0), oblong (1).
10. General body structure: massive (0), slende; (1).
11. Pronotum width /Mesosoma length : broad > 50% (0), narrow£ 50% (1).
12. Mesonotum width/Pronotum width: Broad > 85% (0), narrow£ 85% (1).
13. Metanotum width/ mesonotum width: > 100 (0), < 100 (1).
14. Metanotum width/pronotum width > 75% (0), £ 75% (1).
15. Petiole length, measured as petiole lentgh /mesosoma length ratio: short (<45%)
(0), long (>45%<30%) (1), very long (> 50%) (2).
16. Petiole node heigth, measured as petiole node heigth (PH)/petiole length (PL) ra-
tio: low (< 40%) (0), high (> 40%, <50%) (1), (550%) (2).
17. Petiole node width (PW>)/petiole lentgh (PL): narrow (<45%) (0), broad (> 45%) (1).
18. Petiole node: taller than broad (0), broader than tall (1).
19. Petiole node: broader than long (0), longer than broad (1).
20. Petiole node: less broad than postpetiole (0), broader than postpetiole (1).
21. Petiole node without an anterior defined face (0), with an anterior defined face (1).
22. Petiole node shape in profile: square or subsquare (0), rounded (1), scale (2), an-
terior face concave (3).
23. Postpetiole: narrow (0), broad (1), very broad (2). Narrow: longer than broad; broad:
postpetiole width (PPW>)/ postpetiole length (PPL) <150%; very broad: PPW/PPL > 150%.
24. First segment of gaster: narrower than pronotum width (0), broader than pronotum
width (1).
25. Subpetiolar process: absent (0), present (1).
26. Petiole peduncle: with no hair or very scarce hair (0), hair abundant (1).
27. Propodeal spines: absent (0), short (1), long (2). Length measured as spine length
(SL) /mesosoma length (ML) ratio: short: SL/ML £ 30%, long. SL/ML > 30%.
28. Maximal /minimal posterior femur width ratio: little contrasting > 30% (0), con-
trasting <30%.
29. Femora thickeness: little marked (0), well marked (1).
30. Distribution of femora thickeness: homogeneous throughout (0), medial (1), distal (2).
31. Femorae tubercles: absent (0), present (1).
42
Filogenia del taxon Macromischa
32. Tibiae: no inflated (0), inflated (1).
33. Posterior femorae: short (0), medium (1), long (2). Short: lentgh <70% meso-
soma length (ML ), medium 70% 100%ML.
34. Promesotoraxic suture: no conspicuous or absent (0), conspicuous (1).
35. Dominant prlosity: hairs short and blunt (0), hairs lon and acuminate (1).
36. General pilosity distribution: scarce (0), abundant (1).
37. Scape: With no erect hairs (0), with erect hairs (1).
38. Head: striae absent or feeble and sparsed (0), striae strong and dense (1).
39. Head: punctures absent or feeble and sparse (0), punctures marked and dense (1).
40. Mesosoma: striae absent or feeble and sparsed (0), striae strong and dense (1).
41. Mesosoma: punctures absent or feeble and sparsed (0), striae strong and dense (1).
42. Pronotum: sculptured like the rest of mesosoma (0), sculpturation absent or very
feeble (1).
43. Petiole: not striated (0), striated (1).
44. Petiole: not punctuated (0), punctuated (1).
45. Postpetiole: not striated (0), striated (1).
46. Postpetiole: not punctuated (0), punctuated (1).
47. Legs: with no microsculpturations (0), with sculpturations (1).
48. Tegumentary iridiscent: absent (0), present (1).
49. Tegument with metallic reflections: absent (0), present (1).
50. Tegument: no polychrome (0), polychrome (1).
51. Gaster: with no microsculpturations (0), with microsculpturations (1).
52. Gaster: shining or sligthly shining (0), opaque (1).
53. Nesting behaviour: terricolous (0), arboreal (1), limestone (2).
Appendix 2. Composition of BARON-URBANI'S (1978) morphological species groups of subge-
nus Macromischa of Antillean Leptothorax. Species in synonymy or with nomenclatorial chan-
ges. * (SNELLING, 1986), ** (FONTENLA, 1997).
Apéndice 2. Composición de los grupos morfológicos de especies del sugénero Macromischa de
Leptothorax antillanos, según BARONI-URBANI (1978). Especies en sinonimia o con cambios no-
menclatoriales. *SNELLING (1986), **FONTENLA (1997).
1. allardycei: L. allardycei. 2. creolus: L. creolus. 3. gibbifer: L. gibbifer. 4. gundla-
chi: E. aguayol (=L. gundlachi**), L. gundlachi, L. senectutis, L. wheeleri. 5. isabellae:
L. isabellae, L. hyperisabellae (=L. isabellae*), L. muticus (=L. isabellae*). 6. pastinifer:
L. pastinifer, L. pastoris (=L. pastinifer**), L. schwarzi. 7. pulchellus: L. albispina, L.
androsanus, L. ciferrii, L. flavidulus, L. pulchellus, L. terricolous, L. torrei. 8. punicans:
L. punicans. 9. purpuratus: L. alayoi, L. mortoni, L. myerst, L. porphyritis, L. purpuratus,
L. williami (= L. villarensis*). 10. Sallei*: L. bruneri, L. dissimilis, L. hispaniolae, L. sa-
llei, L. similis (=L. laetus*), L. umbratipes (=L. laetus**). 11. squamifer: L. barbouri,
L. creightont, L. darlingtoni, L. opalinus (=L. darlingtoni**), L. platycnemis, L. scabri-
pes (=L. splendens**), L. splendens, L. squamifer, L. violaceus. 12. versicolor: L. anemicus
(=L. bermudezi**), L. bermudezi, L. iris, L. poeyi, L. rugiceps (=L. poeyi), L. versicolor.
* continental sallei: annexus, aztecus, fuscatus, ocarinae, salvini, skwarrae.
43
Fontenla, J. L.
Apendix 3. Character codification in Antillean Leptothorax.
Outgroups in bold characters.
Apéndice 3. Codificación de caracteres en Leptothorax de las Antillas.
Grupos externos en negrita.
C. emeryi
acervorum
poeyi
bermudezi
versicolor
MEYS
barroi
senectutis
gundlachi
wheeleri
punicans
purpuratus
alayoi
villarensis
banao
porphyritis
nipensis
mortoni
myersi
squami fer
creightoni
barbouri
darlingtoni
splendens
abeli
violaceus
platycnemis
gibbifer
sallei
hispaniolae
laetus
bruneri
dissimilis
isabellae
praecreolus
pastinifer
schwarzi
androsanus
torrel
terricolus
nigricans
albispina
flavidulus
cuyaguateje
pulchellus
C1ÉGEELI
creolus
allardycei
imias
44
12345678901234567890123456789012345678901234567890123
11001003000000021000001100100000000000101001110000000
11000000001001022000101010110100000001010010100000000
o00011220110000100010010001001200211100010000000000002
o0011220110000100010010001001200211100111000000000002
o0011220110000100010010001001100211100111010001000112
o0011111010000110010010001001100111100110010000100002
o0011211010010110010010011001100111110010010000100002
o0011111010010110010010011001100111100010010000100002
10011111010010110010010011001100111110110010000010002
10011110010010110010010011001100111110010010000010002
11000023010010100010110011011100111111011001010000001
11000020010000200010010011201101111111010000000100001
11001011010000200010010011101101111111010000000100001
11111120010010200010110011210100211111010011000000002
10111120010011200010010011210100211111010010100000002
10011120010010200010110011210100211 111111 011110000002
10011120010011100010010011210100211111111011111000112
10011120010011100010010011210100211111101011010000112
10111120010011110010111011210100211110110010000000002
11000020000011121101121011201101111110010000000110001
11000020000011121101121011201101111111010000000110001
11000020000011121101121011201101111111010000000100001
11000021001101011000121001101111111111010100000101001
11000011001101011000121011101111111111010000000101001
11000011001101011000121001101111111110010100000101001
11000011001101011000121001101111111110000000000100001
11000021000101210001120011201101111111010000000100001
11000001001000010100011001101101111111010010010100001
11011010010011110000101001211101111111010010100000001
11011010010011110000101000211101111111010010000000001
11011010010010210000001001201101111111110010100000001
11011010010000110000001001101101111111110011100000001
11011010010000110000001001101101111111110001010000001
11010011011000011000011010101100110001111001011000001
110000100100000110000010111011000100001010011000000072
11001101001101021100131111210000200001111001011000000
11001002001101021101132111111000000000000000000000000
11001001001101021100102111111000000001111001011000000
11000001000000011000111110111000000000101001010000000
11000001000000011000111110111000100000001001000000000
11001002000000011100102111211000000000101001011000000
11000001001000021100102110111000000000101001010000000
11000001001000021000102110111000000000001001000000000
11000002001000021000121111111000000000101000010000000
11000001001000021100102110111000000000000000000000000
11000001001000010000102110111000000000010001010000000
11000001001000011000101010111000000000101001010000000
11000001001100011100101110111000000001010010100000000
11000001000000011000002110111000000000111001010000000
Avicennia, 2000, 12/13: 45-54
El género Typhlatya (Crustacea: Decapoda: Atyidae) en Cuba,
con la descripción de una nueva especie
The genus Typhlatya (Crustacea: Decapoda: Atyidae) in Cuba,
with the description of a new species
Augusto Juarrero de Varona* y Manuel Ortiz**
*Calle 30 n* 525, Nuevo Vedado, Código Postal 10600, Ciudad Habana, Cuba.
** Centro de Investigaciones Marinas, Universidad de la Habana.
Resumen
Se describe una especie nueva de camarón troglobio perteneciente a la familia Atyidae:
Typhlata garciadebrasi, así como la distribución y otros apuntes del resto de los miembros del
género consignados para Cuba. Se incluyen además ilustraciones y una clave de identificación
para las especies cubanas.
Abstract
A new species of the troglobitic shrimp belonging to the Atyidae family, Typhlatya gar-
ciadebrasi, is described herein. Distributions and a key to all of the Cuban members of the
genus, is also given.
Palabras clave: Sistemática, nueva especie, Crustacea, camarones troglobios, Typlatya, Cuba.
Keywords: Systematic, new species, Crustacea, troglobitic shrimps, Typhlatya, Cuba.
INTRODUCCION
Como resultado de una extensa colecta, realizada por el grupo BIOKARST en diferentes
expediciones a espeleoaccidentes cubanos, se pudo incrementar considerablemente la
colección de crustáceos epígeos así como una valiosa información referente a los mis-
mos (JUARRERO, en prensa). Del material procedente de Jagiiey Grande, Provincia de
Matanzas, se determinó un camarón átido nuevo para la Ciencia, perteneciente al género
Typhlatya Creasser, 1936.
Hasta la fecha, se habían consignado para nuestro archipiélago 13 especies de cama-
rones estrictamente cavernícolas, de ellas nueve endémicas (77%), lo que hace que nues-
tro país, con excepción de Estados Unidos y México, exhiba la mayor cantidad de espe-
cies troglobias de América.
En particular, al género Typhlatya pertenecían 11 especies, todas troglobias, distri-
buidas en las Antillas (Cuba, Barbuda, Islas Caicos, República Dominicana, Puerto Rico
e Isla Mona), Bermuda, Isla Ascensión, México (Campeche y Yucatán) e Islas Galápagos
(JUARRERO, 1994). En Cuba este género estaba representado por cuatro especies, tres de
ellas endémicas y una, 7. garciai, compartida con las Islas Caicos.
En este trabajo se describe una especie nueva de camarón epígeo colectada en Cueva
Chicharrones, provincia de Matanzas.
45
Juarrero y Ortiz
MATERIALES Y MÉTODOS
Todas las medidas se expresan en mm. El largo del cefalotorax se corresponde con la distancia
tomada desde las órbitas oculares hasta el borde del caparacho. Las figuras que se presentan han sido
confeccionadas con el auxilio de la cámara lúcida. Abreviaturas utilizadas:
CARE: Colección privada de Alberto Estrada.
COLAJV: Colección privada del primer autor.
COLBKARST: Colección del Grupo BIOKARST, de la Sociedad Espeleológica de Cuba, de-
positada en el Museo Nacional de Historia Natural, Ciudad Habana, Cuba.
CZIES: Instituto de Ecología y Sistemática, Academia de Ciencias de Cuba.
ISER: Instituto de Espeleología “Emile Racovitza”, Bucarest, Rumania.
LC: largo del cefalotorax o carapacho.
MCZ: Museo de Zoología Comparada, Universidad de Harvard, Cambridge, U.S.A.
SISTEMATICA
Clave de las especies cubanas del género Typhlatya.
Modificado de JUARRERO Y GOMEZ (1995).
1. Ojos sin gránulos de pigmentos Z
- Ojos con una mancha pigmentada T. garcia
2. Rostro sobrepasando el nivel de los tallos oculares por delante 3
- Rostro sin sobrepasar el extremo de los tallos oculares
3. Dactilo del cuarto pereiópodo con 6 dentículos; apéndice masculino con setas es-
piniformes, poco más de la mitad del largo del apéndice interno T. elenae
- Dactilo del cuarto pereiópodo con 3 a 4 dentículos; apéndice masculino sin setas es-
piniformes; 1/4 la longitud del apéndice interno T. consobrina
4. Carpo del segundo par de pereiópodos dos veces la longitud del propodio; quelas con
abundante pubescencia; sexto somito abdominal menos de dos veces la longitud del
quinto T. taina
- Carpo del segundo par de pereiópodos casi cinco veces la longitud del propodio;
quelas con escasa pubescencia; sexto somito abdominal cuatro veces la longitud del
quinto T. garciadebrasi n. sp
Typhalatya garciadebrasi n. sp.
(Fig. 1-3)
Material examinado: macho holótipo (LC=4,0) COLBKARST, Cueva Chicharrones,
Bolondrón, provincia de Matanzas; enero de 1995; A. García-Debrás colector. Parátipos:
COLBKARST, un juvenil, colectados y conservados junto al holótipo; 4 machos
(LC=3,0-4,9) y 2 hembras (LC=4,4-4,8), Cueva de Perico Sánchez, Jagiiey Grande, pro-
vincia de Matanzas; 10 de mayo de 1997; A. García-Debrás y L. Echenique colectores.
46
El género Typhlatya en Cuba
Diagnosis. Especie de pequeño tamaño, que se caracteriza por presentar el rostro
corto y dirigido hacia arriba, con el ápice rostral sin sobrepasar los ojos. Ojos sin gránu-
los de pigmentos. Exópodos desarrollados en el tercer maxilípedo y los cinco pares de
pereiópodos. Pereiópodos largos y delgados. Podómetro distal del tercer maxilípedo sin
espinas ni setas espatuladas. Dactilo del quinto pereiópodo con una hileras de 23 a 27 es-
pínulas denticuladas en la superficie flexora. Abdomen con el sexto somito casi cuatro ve-
ces el largo del quinto.
Descripción del holótipo. Carapacho inerme, con el borde anterior redondeado.
Rostro corto y dirigido hacia arriba, en forma de hoja y con la punta aguzada, llegando justo
a la mitad de los tallos oculares. Ojos desarrollados, con la córnea sin gránulos de pigmentos
(Fig. 1). Estilocerito agudo, prominente, que alcanza la primera mitad del segundo artejo
del pedúnculo antenular, de este último, el primer artejo exhibe una fuerte espina en el mar-
gen laterodistal, seguido de una fila de setas espiniformes; el segundo y tercer artejos su-
biguales. Escama antenal con el margen lateral convexo, poco más de dos veces más
largo que ancho, sobrepasando el tercer artejo del pedúnculo antenular. Pedúnculo ante-
nal extendiéndose poco más de la mitad del escafocerito.
Mandíbula izquierda con cuatro dientes en el proceso incisivo; seis dientes en la
mandíbula derecha, seguidos por un fuerte penacho de setas espiniformes en la porción me-
dia de ambas mandíbulas; porción molar con pequeñas setas presentes en todo el borde (Fig.
2C-D). Primera maxila con la lacinia superior subtriangular (Fig. 2A), con escasas setas
en el margen interno y pocas de menor tamaño en el margen externo. Segunda maxila
con el escafognatito desarrollado de igual tamaño que el palpo; extremo distal subredon-
deado, cubierto de grandes setas espiniformes y el borde externo aserrado (Fig. 3A).
Exópodo del primer maxilípedo mucho más largo que ancho, con el lóbulo flagelar bien
3 Na
Figura 1. Typhlatya garciadebrasi sp. n. Vista lateral del cuerpo. Holótipo (LC=4,0).
Figure 1. Typhlatya garciadebrasi n. sp. Lateral view of the body. Holotype (LC=4,0).
47
Juarrero y Ortiz
D
€
Figura 2. Typhlatya garciadebrasi sp. n. A. Primera maxila. B. Primer maxilípedo. C. Mandí-
bula izquierda. D. Mandíbula derecha. Holótipo.
Figure 2. Typhlatya garciadebrasi n. sp. A. First maxile. B. First maxiliped. C. Left mandible. D.
Right mandible. Holotype.
48
El género Typhlatya en Cuba
AOS
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y
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14 10.
CU ermiitit011e!
Figura 3. Typhlatya garciadebrasi sp. n. A. Segunda maxila. B. Segundo maxilipedo. C. Tercer
maxilípedo. D. Apéndice masculino e interno del segundo pleópodo del macho. Holótipo.
Figure 3. Typhlatya garciadebrasi n. sp. A. Second maxilla. B. Second maxilliped. C. Third maxi-
lliped. D. Appendix masculine and appendix interna from second pleopods of male. Holotype.
49
Juarrero y Ortiz
desarrollado; palpo con el extremo distal truncado, formando un pequeño lóbulo alar-
gado; endito algo más ancho que el exópodo, con el borde interno cubierto completa-
mente de setas (Fig. 2B). Segundo maxilípedo con el flagelo del exópodo desarrollado y
largo y dos veces la longitud del endópodo, con cinco setas terminales y siete en la mitad
basal; podobranquia presente (Fig. 3B). Tercer maxilípedo que sobrepasa con el podó-
metro distal el escafocerito, presenta un flagelo que llega justo a la unión del primer artejo
con el segundo (Fig. 3C); podómetro distal sin espinas ni setas espatuladas.
Todos los pereiópodos con exópoditos bien desarrollados, reduciéndose algo en el
cuarto y quinto par. Pereiópodos 1 y 2 delgados, con un penacho de pelos escasos, en la
punta de los dactilos; dedos dos veces más largos que la palma (Fig. 1); carpo del se-
gundo par de pereiópodos más de dos veces la longitud del mero y cinco veces la longi-
tud del propodio. Tercer, cuarto y quinto par de pereiópodos mayores y más robustos
que los dos primeros, con una o dos espinas notables en la mitad posterior del mero.
Dactilo del quinto par, de mayor tamaño que el resto, con una hilera de 25 a 27 espínulas
denticuladas en la superficie.
Abdomen con las pleuras del primer al tercer somito redondeadas y cuarto y quinto su-
bacuminadas. Sexto segmento abdominal cuatro veces la longitud del quinto (Fig. 1).
Segundo pleópodo del macho con el apéndice masculino menor que la mitad de la
longitud del apéndice interno, con un penacho de setas espiniformes en el ápice. Apéndice
interno con una hendidura subdistal (Fig. 3D).
Distribución. Provincia de Matanzas: Bolondrón, Cueva Chicharrones; Jagiiey
Grande, Cueva Perico Sánchez.
Etimología. Especie dedicada como muestra de profundo agradecimiento y gratitud,
al biólogo y espeleólogo Alfredo García-Debrás, quien además de ser el colector de esta
especie, ha depositado en nuestras manos material de casi todas las cuevas cubanas, en es-
tos últimos años.
Comparación. Considerando la afinidad que existe entre las especies asignadas a
este género se han propuesto diferentes grupos taxonómicos, en dependencia de los prin-
cipales caracteres que la definen (HoBBs III AND HoBs JR., 1976; ESTRADA Y GOMEZ,
1987; JUARRERO, 1994). Typhlatya graciadebrasi n. sp., corresponde al grupo de espe-
cies que se caracterizan por presentar el rostro sin sobrepasar los tallos oculares y los
ojos completamente despigmentados. A este grupo pertenecen T. galapaguensis Monod
y Cals, 1970, descrita de Isla Santa Cruz (Islas Galápagos) y T. mitchelli Hobbs y Hobbs,
1976, conocida solo del Estado de Yucatán.
A simple vista T. garciadebrasi n. sp. puede confundirse con 7. mitchelli por el pare-
cido que exhiben ambos taxones en algunas estructuras de importancia taxonómica, sin em-
bargo difieren notablemente en los siguientes caracteres:
1. Pubescencia de las quelas de los pereiópodos 1 y 2, menor en 7. garciadebrasi n. sp.
2. Proporción entre los dedos y la palma de los pereiópodos 1 y 2 (palma mayor que
los dedos en 7. michelli, contrario en 7. garciadebrasi n. sp.).
SO
El género Typhlatya en Cuba
3. Relación entre la longitud del carpo y el mero en el segundo par de pereiópodos
(mucho mayor en 7. garciadebrasi n. sp.).
4. Aparato bucal (artejo distal del tercer maxilípedo de T. michelli presenta 14 filas de
setas espatuladas; ausentes en 7. garciadebrasi n. sp.).
5. Longitud del sexto segmento abdominal (solo dos veces la longitud del quinto en 7.
michelli).
6. Margen flexor del dactilo del quinto pereiópodo con 40 setas denticuladas en 7.
michelli y 25 en T. garciadebrasi n. sp.
7. Segundo pleópodo del macho (el apéndice masculino de 7. michelli sobrepasa el apén-
dice interno).
Typhlatya garciai Chace, 1942
Fig. 4
Typhlatya garciai, Chace 1942: 99-101
Typhlatya garciae-Rioja, 1971: 524 (error ortográfico).
Material examinado: Dos machos (LC=3,9-4,1) y una hembra (LC=4,2) (COLJV, no.
1200-1203) colectados en casimbas en Playa Pesquero, Rafael Freyre, Holguín, por Nils
Navarro y Alejandro Fernández, el 31 de octubre de 1977.
Localidad tipo. Cueva Potrero del Molino, Las Cuatrocientas Rosas, Banes, provin-
cia de Holguín, Cuba.Tipo. Macho (MCZ n* 12210).
Distribución en Cuba. Provincia de Pinar del Río: Viñales, Cueva de las Represas
(HOLTHUIS, 1977); Cueva Grande (JUBERTHIE ET AL. 1977). Provincia de Holguín: Banes,
Cueva Potrero del Molino (CHACE, 1942 y BOTOSANEANU Y HOLTHUIS, 1970), Rafael
Freyre, Casimbas de Pesquero (JUARRERO, en prensa).
Extensión geográfica. Antillas (Cuba y Providenciales, Islas Caicos).
Figura 4. Typhlatya garciai. Vista lateral del cuerpo.
Figure 4. Typhlatya garciai. Lateral view of the body.
yl
Juarrero y Ortiz
Typhlatya taina Estrada y Gómez, 1987
Fig: 5
Typhlatya taina Estrada y Gómez, 1987: 1-12
Material examinado. Dos hembas parátipos (CARE [1 00012, 00006) (LC=3,8-4,2),
Cueva de la India, Santa Cruz del Norte, provincia Habana, colectado por Alberto R. Es-
trada y Humberto Ramírez el 11 de febrero de 1981.
Localidad tipo. Cueva de la India, 2 Km al E de Puerto Escondido, Santa Cruz del
Norte, provincia La Habana, Cuba. Tipo. Macho (CARE n*. 1.00 004).
Distribución. Sólo se conoce de la localidad tipo.
Typhlatya elenae Juarrero, 1994
Fig. 6
Typhlatya elenae Juarrero, 1994: 57-66
Material examinado. Un macho (LC=2,6) (COLBKARST), Cueva de Perico Sán-
chez, 5 Km al N de Jagijey Grande, provincia de Matanzas, colectado por A. García-De-
brás y A. Pérez el 23 de febrero de 1992:
Localidad tipo. Cueva Perico Sánchez, 5 Km al N de Jagiey Grande, provincia de Ma-
tanzas, Cuba. Tipo. Macho (CZIES).
Distribución. Conocido solo de la localidad tipo.
Typhlatya consobrina Botosaneanu y Holthuis, 1970
Typhlatya consobrina Botosaneanu y Holthuis, 1970: 123-127
Material examinado. Un macho (LC=2,1) (COLBKARST), Cueva Chicharrones,
provincia de Matanzas, colectado por A. García-Debrás en enero de 1995.
Localidad tipo. Cueva del Agua, al pie del Cerro Tuabaquei, Sierra de Cubitas, muy
cerca de la “Finca La Estrada”, NE de la provincia de Camagúiey, Cuba.
Tipo. Macho (ISER).
Distribución. Provincia de Pinar del Río: Guanahacabibes, Cueva del Agua (Boto-
saneanu y Holthuis, 1970). Provincia de Matanzas: Bolondrón, Cueva Chicharrones (PÉ-
REZ Y GARCIA-DEBRAS, 1997). Provincia de Camagiiey: Sierra de Cubitas, Cueva del
Agua (BOTOSANEANU Y HOLTHUIS, 1970). Todas en Cuba.
2
El género Typhlatya en Cuba
p | pz FIDA //
di ) a A | ¡E ] () )
4,
Figura 5. Typhlatya taina. Vista lateral del cuerpo.
Figure 5. Typhlatya taina. Lateral view of the body.
Figura 6. Typhlatya elenae. Vista lateral del cuerpo.
Figure 6. Typhlatya elenae. Lateral view of the body.
13
Juarrero y Ortiz
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54
Avicennia, 2000, 12/13: 55-62
Una nueva especie de misidáceo marino del género Amathimysis
Brattegard, 1969 (Mysidacea, Mysidae), de aguas cubanas
A new species of marine opposum shrimp of the genus Amathimy-
sis Brattegard, 1969 (Mysidacea, Mysidae), from Cuban waters
Manuel Ortiz, Rogelio Lalana y Anna Sánchez-Díaz.
Centro de Investigaciones Marinas. Universidad de La Habana.
Resumen
Se describe una nueva especie de misidáceo, simbionte de la esponja Callyspongia vagi-
nalis, colectada en una localidad de Miramar, en la costa norte de la provincia Ciudad de La
Habana. Es la séptima especie que se describe del género Amathimysis, siendo la segunda
que aparece en Cuba. Las diferencias fundamentales con las restantes especies conocidas,
también son presentadas.
Abstract
A new species of mysid shrimp found in symbiosis with the sponge Callyspongia vaginalis,
which was collected at Miramar, North coast of the province Ciudad de La Habana, is here des-
cribed. It is the seventh known species of the genus Amathimysis, been the second ones recorded
in Cuba. The main differences of this new species with the others known, are also given.
Palabras clave: Sistemática, Crustacea, Mysidacea, Plataforma cubana.
Key words: Systematic, Crustacea, Mysidacea, Cuban platform.
INTRODUCCION
Recientemente, aparecieron formando parte de los organismos asociados a la esponja
Callyspongia vaginalis (Lamarck, 1813), tres misidáceos pertenecientes al género Amat-
himysis, que no coincidían con las descripciones de las especies del género dadas por
BRATTEGARD (1969; 1974), STuCkK Y HEARD (1981), MURANO (1986), MURANO Y CHESS
(1987), de las cuales, solamente A. gíbba ha sido registrada para las aguas cubanas (BA-
CESCU Y ORTIZ, 1984).
Por tal motivo, dichos peracáridos fueron estudiados, llegándose a la conclusión de que
se trataba de una especie nueva, que se describe a continuación.
MATERIALES Y MÉTODOS
La esponja hospedera de los misidáceos, fue colectada mediante buceo autónomo,
con una bolsa de polietileno, que se sumergió cerrada y se abrió para envolver la es-
ponja, arrancarla y extraerla, luego de cerrar la bolsa, a la mayor brevedad.
Las figuras presentadas se han realizado con el auxilio de la cámara lúcida.
55
Ortiz, Lalana y Sánchez-Díaz
SISTEMATICA
FAMILIA MYSIDAE Dana, 1850
SUBFAMILIA MYSINAE Dana, 1850
Tribu Erythropini Hansen, 1910
Amathimysis torleivi especie nueva
(Figuras 1-4)
Holotipo. Macho adulto; 3,2 mm; costa de Miramar, Playa, Provincia Ciudad de La Ha-
bana; 10 de marzo de 1999; 8 m; en simbiosis con la esponja Callyspongia vaginalis; co-
lectada y depositada en la colección de Invertebrados del Centro de Investigaciones Ma-
rinas, Universidad de La Habana; n* 167.
Paratipos. Hembra con oostegitos y 4 embriones; 2,8 mm; hembra con oostegitos; 3
mm, colectadas y depositadas junto al holotipo; n* 168.
Descripción del macho. Cuerpo robusto, con el carapacho mucho más ancho que el
abdomen. Carapacho dorsalmente liso; placa rostral triangular, con los bordes anteriores
convexos, con ápice puntiagudo; borde posterior muy cóncavo, dejando sin cubrir parte
del octavo segmento toráxico.
Antena con la escama antenal desnuda en su ángulo distal externo; ángulo distal ex-
terno del simpodio con un diente, margen interno setoso.
Anténula con el pedúnculo fuerte, artejo 3 más largo que la suma del 1 y el 2; ángulo
distal interno del artejo 3 llevando una seta simple; apéndice masculino, cuadrangular,
densamente armado de setas.
Ojos redondeados, de mediano tamaño, pedúnculo más largo y de menor diámetro
que la córnea, de color marrón oscuro, en alcohol.
Labio superior en forma de corazón, asimétrico, desnudo.
Mandíbula derecha con 3 dientes incisivos; lacinia mobilis torcida y puntiaguda;
mandíbula izquierda con dos dientes incisivos; lacinia mobilis ausente; palpo mandibular
con 3 artejos, el 2 muy alargado, con 5 setas en su borde interno; con 4 en una promi-
nencia sub distal; tercio distal cubierto por un penacho de setas muy densas; artejo 3 ar-
mado de una espina distal larga y curvada, colocada junto a otra simple más corta; con una
hilera de setas simples, arqueadas y otra interna de 5 setas largas, dispuestas entre 11
más cortas; algunas plumosas.
Maxílula con 12 espinas distales y 3 setas subdistales en el lóbulo externo; con 3 se-
tas robustas con sétulas y una de la mitad del largo de las anteriores, en el lóbulo interno.
Maxila con el exópodo pequeño, armado de 3 setas cortas; endópodo con 2 artejos,
siendo el distal mucho más largo; lóbulo del segundo artejo simpodial amplio, llevando 16
setas marginales; lóbulo del tercer artejo simpodial bífido, setoso distalmente.
Endópodo toráxico 1 robusto, sin endito, artejo 5 algo más largo que la mitad del 6; ar-
tejo 7 ligeramente curvado en su porción distal..
Endópodo toráxico 2 delgado, artejo 4 más largo que el 5; artejo 7 setoso, truncado
distalmente.
S6
Nueva especie de misidáceo
Figura 1. Amathimysis torleivi sp. n. A, vista dorsal de la región anterior. B, escama antenal. C,
labio superior. D, vista lateral del carapacho. E. maxílula.
Figure 1. Amathimysis torleivi n. sp. A, dorsal view of anterior part of body. B, antenal scale. C,
upper lip. D, lateral view of carapace. E, maxillula.
ay
Ortiz, Lalana y Sánchez-Díaz
Figura 2. Amathimysis torleivi sp. n. A, maxila. B, palpo mandibular. C, mandíbulas. D, penes.
Figure 2. Amathimysis torleivi n. sp. A, maxilla. B, mandibular palp. C, mandibles. D, penis.
58
Nueva especie de misidáceo
Figura 3. Amathimysis torleivi sp. n. A, endópodo toráxico 1. B, endópodo toráxico 2. C, endó-
podo toráxico 3. D, pleópodo 1. E, pleópodo 2. F, pleópodo 3.
Figure 3. Amathimysis torleivi n. sp. A, thoraxic endopod 1. B, thoraxic endopod 2. C, thoraxic
endopod 3. D, pleopod 1. E, pleopod 2. F, pleopod 3.
59
Ortiz, Lalana y Sánchez-Díaz
Figura 4. Amathimysis torleivi sp. n. A, pleópodo 5. B, pleópodo 4. C, telson y urópodo derecho.
D-G, hembra. D, rostro. E, parte distal de la escama antenal. F, parte distal del telson. G, parte
distal del pedúnculo antenular.
Figure 4. Amathimysis torleivi n. sp. A, pleopod 5. B, pleopod 4. C, telson and right uropod. D-
G, female. D, rostrum. E, distal part of antenal scale. F, distal part of telson. G, distal part of an-
tennular peduncle.
60
Nueva especie de misidáceo
Endópodo toráxico 3 estrecho, con la articulación entre los artejos 3 y 6 oblicua; artejo
7 alargado y curvo, con una uña larga.
Resto de los endópodos toráxicos ausentes.
Pleópodo 1 con el endópodo bífido, compuesto de un lóbulo ovoidal y otro pseudo-
branquial, con 2 setas terminales; exópodo con 7 artejos, llevando, cada uno, 1 seta plu-
mosa salvo el terminal, que presenta 2.
Pleópodos 2-5 con las dos ramas bien desarrolladas; endópodo compuesto de 6 arte-
jos, con el artejo 1 bífido, formando un lóbulo pseudobranquial, más o menos setoso;
exópodo con 6 artejos, salvo el 3, que tiene 7.
Urópodo cubierto de setas largas en ambos márgenes, con el exópodo más largo que
el endópodo; margen externo casi recto, ápice truncado, borde interno curvado; endó-
podo más estrecho que el exópodo, casi cubierto de setas largas por ambos márgenes.
Telson entero, con la base del ancho de su largo; con la mitad basal de sus bordes
convexos, la otra con estos cóncavos, armado distalmente con 4 espinas romas, 2 largas
y 2 cortas. ,
Penes rectangulares, dispuestos paralelamente, llevando un lóbulo distal provisto de un
largo y curvado estilete.
Hembra muy semejante al macho, en aspecto general y talla; con la placa rostral,
aunque triangular, con el ápice algo hundido; marsupio conformado por 2 pares de oos-
tegitos, naciendo los más amplios del endópodo toráxico 8 y los más pequeños del 7.
Telson armado distalmente de 4 espinas, 2 cortas externas y 2 largas internas.
Etimología. Especie dedicada al Dr. Torleiv Brattegard, autor del género y de 3 de las
especies previamente descritas. En honor a su labor, respecto al conocimiento de los mi-
sidáceos del Golfo de México y del Mar Caribe.
DISCUSION
La especie nueva, Amathimysis torletvi, posee el carapacho liso, mientras que Amat-
himysis gibba Brattegard, 1969; A. cherados Brattegard, 1974; A. trigiba Murano y
Chess (1987) y A. brattegardi Stuck y Heard, 1981, presentan una, dos, tres o más joror-
bas en el dorso del carapacho, con lo cual la determinación de estas especies, se hace
muy sencilla. Otras diferencias con A. giíbba son que, A. torleivi especie nueva, posee un
rostro más puntiagudo; el exópodo de la maxila más pequeño; el palpo mandibular con una
setotáxia diferente y el exópodo del urópodo más largo. Se diferencia además, de A. che-
rados, por presentar el artejo 5 del toracópodo 2 casi desprovisto de setas largas; la escama
antenal y las espinas largas del telson, más cortas. Se diferencia de A. polita Brattegard,
1974, porque el borde posterior del carapacho deja expuesta una parte del último seg-
mento toráxico; el apéndice masculino de la antena es rectangular; las espinas telsónicas
largas son mucho más cortas; tiene una setotaxia diferente en el palpo mandibular y el
artejo 6 del endópodo 2 casi desprovisto de setas largas. De A. brattegardi, puede distin-
61
Ortiz, Lalana y Sánchez-Díaz
guirse por poseer la placa rostral triangular; las pleuras abdominales con la parte posterior
poco prominentes; el ángulo distal externo del simpodio con un diente más pequeño; el exo-
podito del urópodo algo más largo que el endopodito y el telson menos espinoso distal-
mente.
De A. trigibba, especie colectada en las costas de California, se distingue, por poseer
los ojos más pequeños; la escama antenal más estrecha; la lacinia mobilis de la mandíbula
derecha curvada y puntiaguda; la setotaxia del palpo mandibular diferente; el exópodo
de la maxila más estrecho y menos setoso y las espinas largas de la región distal del tel-
son, mucho más cortas.
Las diferencias con A. serrata Murano, 1986, apartándonos de que esta última posee
una pequeña quilla en el dorso del carapacho, son la ausencia de constricción entre el tó-
rax y el abdomen; la setotaxia diferente en el palpo mandibular y presenta un exópodo mu-
cho más pequeño y menos setoso en la maxila.
Por otra parte, A. torleivi especie nueva, se diferencia de las especies antes mencionadas
por presentar el ángulo distal externo de la escama antenal desarmado.
Finalmente, A. torleivi especie nueva, es un misidáceo espongícola, mientras que las
restantes son de vida libre, habitando los fondos blandos, con o sin Thalassia, cercanos al
arrecife.
BIBLIOGRAFIA
BACESCU, M. Y ORTIZ, M. 1984. Contribution to the knowledge of the Mysidacea (Crustacea) of the Cuban in-
sular shelfwaters. Trav. Mus. Hist. Nat. “Grigore Antipa”, 26: 1-23.
BRATTEGARD, T. 1969. Marine Biological Investigations in the Bahamas 10. Mysidacea from shallow water in
the Bahamas and southern Florida. Part 1. Sarsia 39: 17-106.
BRATTEGARD, T. 1974. Additional Mysidacea from shallow water on the Caribbean coast of Colombia. Sarsia
57: 47-86.
MURANO, M. 1986. Three new species of Mysidacea from Saint Croix, Virgin Islands. Crustaceana 50 (2):
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MURANO, M. Y CHESS, R. 1987. Four new mysids from Californian coastal waters. Jour. Crust. Biol. 7 (1):
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STUCK, K. C. Y HEARD, R. 1981. Amathimysis brattegardi, a new peracarid (Crustacea: Mysidacea) from con-
tinental shelf waters off Tampa Bay, Florida. Jour. Crust. Biol. 1 (2): 272-278.
62
Avicennia, 2000, 12/13: 63-68
Una nueva especie de anfípodo espongícola del género Hoplophe-
onoides Shoemaker, 1956 (Gammaridea; Cyproideidae), de Cuba
A new spongicolous amphipod species of the genus Hoplopheonoi-
des Shoemaker, 1956 (Gammaridea; Cyproideidae), from Cuba
Manuel Ortiz, Rogelio Lalana y Anna Sánchez-Díaz.
Centro de Investigaciones Marinas. Universidad de La Habana, Cuba.
Resumen
Se describe una nueva especie del género Hoplopheonoides (Amphipoda, Gammaridea),
simbionte de la esponja Callyspongia vaginalis, colectada en la costa norte de la Provincia Ciu-
dad de La Habana. También, se adicionan nuevos datos a la diagnosis del género y se pre-
sentan las diferencias más notables con H. obesa, la única especie conocida hasta ahora. Se trata
del primer registro para las aguas cubanas, de un representante de la familia Cyproideidae.
Abstract
A new species of amphipod crustacean of the genus Hoplopheonoides (Amphipoda,
Gammaridea), symbiont of the sponge Callyspongia vaginalis, collected at the North coast
of the Ciudad de La Habana Province, is here described. New data regarding the diagnosis of
the genus, and the main differences with A. obesa, the only species known, up today, are gi-
ven. This is the first record of a species of the family Cyproideidae, for the Cuban waters.
Palabras clave: Sistemática, Amphipoda, Gammaridea, aguas cubanas.
Key words: Systematic, Amphipoda, Gammaridea, Cuban waters.
INTRODUCCION
Durante el desarrollo de una investigación sobre los organismos simbiontes, de la es-
ponja Callyspongia vaginalis, en una localidad de la costa norte de la provincia Ciudad de
La Habana, fue detectado un anfípodo que, luego de ser estudiado, ha resultado ser una es-
pecie nueva, que a continuación se describe.
El género Hoplopheonoides Shoemaker, 1956, fue establecido luego del estudio de
varios ejemplares de H. obesa, colectados en Loggerhead Key, Dry Tortugas, Florida, a
4,4 m de profundidad, entre la arena y la roca arrecifal, en el año 1926, constituyendo el
único registro conocido hasta el presente, de este raro anfípodo.
MATERIAL Y MÉTODOS
La esponja donde apareció el anfípodo objeto de este trabajo, fue colectada mediante buceo
autónomo, bajando una bolsa de polietileno cerrada, hasta que, en el momento de la colecta, se
abrió y envolvió a la esponja, que de inmediato fue arrancada del sustrato, procediéndose, a la ma-
yor brevedad, a cerrar la bolsa, para evitar el escape de simbiontes o la entrada de plancton.
Las figuras que se presentan han sido realizadas con el auxilio de la cámara lúcida.
63
Ortiz, Lalana y Sánchez-Díaz
SISTEMATICA
FAMILIA CYPROIDEIDAE J. L. Barnard, 1974
Hoplopheonoides shoemakeri especie nueva
(Figuras 1-3)
Holotipo. Macho; 1, 3 mm (rostro - parte posterior del primer segmento del meta-
soma); costa de Miramar, Playa, Provincia Ciudad de La Habana; 10 de marzo de 1999;
8 m de profundidad; en simbiosis con la esponja Callyspongia vaginalis; depositado en la
colección de invertebrados del Centro de Investigaciones Marinas, Universidad de La
Habana, n* 166.
Diagnosis. Cabeza sin rostro evidente; ojos ovalados de tamaño medio; antenas cortas,
subiguales en largo; flagelo accesorio ausente; labio inferior sin lóbulo interno; mandí-
bula con el palpo mandibular compuesto de 3 artejos; molar fuerte y triturador; lóbulo ex-
terno del maxilípedo más largo que el interno; coxa 3 con una escotadura ventral; coxa 4
con un reforzamiento en el ángulo anteroventral y una escotadura posterodorsal; cuerpo ro-
busto, con el ancho máximo, en vista dorsal, a nivel del segemento 3 del pereión.
Descripción. Cabeza cuadrangular, con la frente ancha y casi recta; ojos compues-
tos por numerosos onmatídeos.
Antena 1 con el artejo 1 del pedúnculo, del largo de los artejos 3 y 4 juntos; flagelo com-
puesto de un solo artejo, llevando 8 setas largas paralelas.
Antena 2 con la glándula antenal avanzando hasta la mitad del artejo 3 del pedún-
culo; artejos 4 y 5 del pedúnculo subiguales en largo, el 1, el más corto; flagelo com-
puesto de 4 artejos, el distal con 2 setas alargadas.
Mandíbulas alargadas, con los incisivos dentados, sin lacinia mobilis, molar muy
prominente; palpo mandibular incertado junto al molar, con 3 artejos que incrementan
su largo distalmente, carentes de setas; mandíbula izquierda con 6 setas auxiliares; man-
díbula derecha con 7 setas auxiliares.
Labio superior bilobulado, con una hendidura intermedia profunda.
Labio inferior con los bordes internos de los lóbulos externos paralelos, formando
una escotadura cuadrangular; lóbulos mandibulares poco evidentes.
Maxila 1 alargada, lóbulo interno llevando 1 espina distal y 10 espinas laterales;
palpo con 3 espinas distales; lóbulo interno perdido durante la microdisección.
Maxila 2 alargada, con el lóbulo externo más largo que el interno, con una espina
distal cada uno.
Maxilípedo con el lóbulo externo alcanzando la mitad del artejo 2 del palpo; lóbulo in-
terno más corto, ambos con una espina distal; artejo 3 con un lóbulo distal, que cubre
menos de la mitad del artejo 7.
Coxa 1 pequeña, redondeada; gantópodo 1 con el artejo 2 muy fuerte, más ancho que
el artejo 5; artejos 2-4 con una espina posterior distal; lóbulo posterior del artejo 5 pro-
64
Nuevo anfípodo espongícola
Figura 1. Hoplopheonoides shoemakeri sp. n. A, vista dorsal del animal (coxas 3 y 4 y gnatópodo
2 levantados). B, antena 1. C, labio superior. D, antena 2. E. maxila 2. F, labio inferior. G, maxila 1.
H, mandíbula izquierda. Í, región distal de la mandíbula derecha. J, vista lateral del molar derecho.
Figure 1. Hoplopheonoides shoemakeri n. sp. A, dorsal view of animal (coxae 3 and 4, and gnat-
hopod 2 turned upward). B, antenna 1. C, upper lip. D, antenna 2. E, maxillia 2. E, lower lip. G,
maxilla 1. H, left mandible. 1, distal part of right mandible. J, lateral view of right molar.
65
Ortiz, Lalana y Sánchez-Díaz
uy
Figura 2. Hoplopheonoides shoemakeri sp. n. A, maxilípedo. B, gnatópodo 1. C, gnatópodo 2.
D, pereiópodo 4.
Figure 2. Hoplopheonoides shoemakeri n. sp. A, maxilliped. B, gnathopod 1. C, gnathopod 2. D,
pereiopod 4.
66
Nuevo anfípodo espongícola
yectado 1/4 bajo el 6, armado de espinas distales; borde palmar del artejo 6 muy corto, con
una escotadura que lleva una espina superior y 2 inferiores; artejo 7 mucho más largo
que la palma, con espinas en su borde interno.
Coxa 2 pequeña, cuadrangular; gnatópodo 2 con el artejo 2 robusto, más ancho que el
artejo 5, artejos 2 y 3 con 1 espina distal posterior; artejos 4 y 5 formando un lóbulo pos-
terior discreto y setoso; borde palmar del artejo 6 muy cóncavo, ángulo palmar definido
por 2 espinas fuertes; artejo ligeramente más largo que la palma.
Coxa 3 grande, proyectada anteriormente, curvada hasta la parte ventral de su margen;
pereiópodo 3 ausente.
Coxa 4 mayor que la 3, redondeada hasta su ángulo posterodorsal, llegando hasta el f1-
nal de la coxa 5.
Coxa 5 con el borde posterior convexo; pereiópodos 4-7 con los artejos 3-7 ausentes;
con el artejo 2 muy alargado, desprovisto de setas; artejo 2 del pereiópodo 7 ligeramente
más ancho que los restantes, de bordes paralelos.
Coxa 6 cuadrangular.
Coxa 7 curvada ventralmente.
Epímeros redondeados, desnudos; epímero 1 dirigido hacia detrás; epímero 3 orientado
hacia delante.
Pleópodos con los pedúnculos casi del mismo largo que el artejo 2 de los pereiópodos;
ramas internas de los pleópodos 2 y 3, del largo de sus pedúnculos.
Urosomites 4-6 ausentes.
Ejemplar único.
Figura 3. Hoplopheonoides shoemakeri sp. n. Vista lateral de los 3 últimos segmentos pereiona-
les y los 3 primeros del pleón, con sus pereiópodos y pleópodos respectivos.
Figure 3. Hoplopheonoides shoemakeri n. sp. Lateral view of the last 3 pereional segments and
3 first of the pleon, with its pereiopods and pleopods, respectively.
67
Ortiz, Lalana y Sánchez-Díaz
Etimología. Especie dedicada a uno de los especialistas en anfípodos más connotado
de todos los tiempos, Clarence R. Shoemaker, quien describió el género y la única espe-
cie conocida hasta ahora.
DISCUSION
Con el hallazgo de Hoplopheonoides shoemakeri especie nueva, se hace necesario
adicionar a la diagnosis del género las siguientes características: cabeza sin rostro; ojos com-
puestos de numerosos ommatídeos; cuerpo, en vista dorsal, ensanchándose brúscamente
a partir de los segmentos 3 ó 4; labio superior hendido profundamente; labio inferior con
una escotadura cuadrangular entre los lóbulos externos, lóbulo interno ausente, lóbulo
mandibular pequeño; lóbulos del maxilípedo sobrepasando o no, el artejo 1 del palpo;
pereiópodo 7 con el artejo 2 lineal o algo expandido; pedúnculo de los urópodos subi-
gual en largo al artejo 2 de los pereiópodos.
Párrafo aparte, merece el descubrimiento del palpo mandibular (ausente en la diagnosis
original), naciendo a nivel del molar y compuesto de 3 artejos estrechos. En cuanto a la in-
formación al respecto de SHOEMAKER (1956), luego confirmada por BARNARD Y KARAMAN
(1991), en base al criterio del primero, no nos queda más que pensar, en un error al dise-
carse el material tipo. Dicho palpo es tan pequeño y delicado que, perfectamente, pudo con-
fundir a Shoemaker, máxime, si se tiene en cuenta que los microscopios de la época, no
eran tan potentes como los actuales.
Por otra parte, H. shoemakeri especie nueva, se diferencia de H. obesa por presentar
el flagelo de la antena 1 uniarticulado; posee glándula antenal desarrollada en la antena 2;
el lóbulo externo del maxilípedo más largo que el interno, llegando hasta la mitad del ar-
tejo 2 del palpo; el artejo 2 de los gnatópodos más poderoso; el borde palmar del artejo 6
del gnatópodo 2 más cóncavo; la coxa 3 con una escotadura ventral más marcada; la
coxa 4 con un reforzamiento en su ángulo antero ventral; la coxa 5 con su margen ventral
convexo; epímero 3 dirigido hacia delante; el artejo 2 del pereiópodo 7 estrecho, con sus
bordes paralelos. Otro aspecto a considerar, es que A. obesa, habita la roca y arena del arre-
cife (SHOEMAKER, 1956), mientras que HA. shoemakeri especie nueva, vive asociada a la es-
ponja Callyspongia vaginalis, tolerando, al parecer, el exudado del porífero.
Finalmente, cabe señalar que H. shoemakeri especie nueva, es el primer represen-
tante de la familia Cyproideidae que se registra para las aguas cubanas.
BIBLIOGRAFIA
BARNARD, J. L. Y KARAMAN, G. 1991. The Families and Genera of marine Gammaridean Amphipoda (Except
marine Gammaroids). Rec. Austral. Mus. Supplement 13 (1): 1-417.
SHOEMAKER, C. R. 1956. A new genus and two new species of amphipods from Dry Tortugas, Florida. Journ.
Wash. Acad. Sci. 46 (2): 61-64.
68
Avicennia, 2000, 12/13: 69-78
Los equinoideos (Echinodermata: Echinoidea) del Archipiélago
cubano
The sea urchins (Echinodermata: Echinoidea) from the Cuban
Archipelago
Mercedes Abreu*, Francisco Solís-Marín** y Alfredo Laguarda-Figueras **
* Instituto de Oceanología, Ave. 1 "* n* 18406 e/ 184 y 186, Playa 1210, La Habana, Cuba.
** laboratorio de Sistemática y Ecología de Equinodermos. Instituto de Ciencias del Mar y
Linnología, UNAM, Apto. Postal 70-305, México D. F. 04510.
Resumen
Se ofrece una lista actualizada de las 63 especies de equinoideos registrados en las aguas
cubanas, distribuidas en 13 ordenes, 24 familias y 50 géneros. En cada una de ellas, se dan las
referencias de la literatura donde han sido encontradas para Cuba y sus limites de profundidad.
Abstract
An updated list of the 63 species of echinoids existing in Cuban waters, distributed in 13
orders, 24 families and 50 genera is offersed. References of the literature where they have
been reported for Cuba and their depth limits are given for each species.
Palabras claves. Catálogo, Echinoidea, Echinodermata, Cuba.
Key words. Catalog, Echinoidea, Echinodermata, Cuba.
INTRODUCCION
La Clase Echinoidea comprende 900 especies conocidas (HENDLER, G., MILLER, J.
E., Pawson, D. L. Y KIER, M. P., 1995). En Cuba se han registrado hasta la fecha 63 es-
pecies, las cuales se distribuyen en 13 ordenes, 24 familias y 50 géneros.
Entre los aportes al conocimiento de los equinoideos de Cuba, los más significativos
tenemos los realizados por H. L. CLARK (1901), (1933), (1941), MORTENSEN (1910),
(1928), (1935), (1940), (1943), (1948), (1951) y SuarEz (1974). Además de la literatura
citada, se revisaron los echinoideos depositados en las colecciones del Museo Poey de
la Universidad de La Habana y en el Instituto de Oceanología
En el catálogo se presentan las especies válidas utilizando el orden taxonómico pro-
puesto por SMITH (1984). La abreviatura Ref. indica las referencias bibliográficas donde
las especies están citadas para Cuba y los limites de profundidad han sido tomados de
SERAFY (1979), HENDLER ET AL. (1995) y ESPINOSA, ABREU Y GOMEZ (1998).
En el catálogo de SUAREZ (1974) se citan 67 especies de equinoideos para aguas cu-
banas. De ellas 11, aunque son de alta probabilidad de aparición en Cuba, aún no han
sido realmente registradas. Además, se localizaron en la literatura 4 especies que sí esta-
ban citadas para Cuba antes de SUAREZ (1974) más 3 mencionadas posteriormente por
ESPINOSA, ABREU Y GOMEZ (1997) y ABREU Y DEL VALLE (1998).
69
Abreu, Solís-Marín y Laguarda-Figueras
LISTA DE ESPECIES
70
Phylum ECHINODERMATA de Bruguiere, 1789
Subphylum ECHINOZOA Haeckel in Zittel, 1895
Clase ECHINOIDEA Leske, 1778
Sub Clase CIDAROIDEA Claus,1880
Orden CIDAROIDA Claus, 1880
Familia CIDARIIDAE GRAY,1825
Género Histocidaris Mortensen, 1903
Histocidaris nutting1 Mortensen, 1926
Ref: H. L. CLARK (1941); MORTENSEN (1928); Sirven-Villuenda (1945).
Prof. 225-740 m
Histocidaris sharreri (A. Agassiz, 1880)
Ref: H. L. Clark (1941).
Prof. 200 -740 m.
Género Stereocidaris Pomel, 1883
Stereocidaris ingolfiana Mortensen, 1903
Ref: H. L. Clark (1941).
Prof. 300-1745 m.
Género Cidaris Leskes, 1778
Cidaris blakei (A.Agassiz,1878)
Ref: A. AGASSIZ (1878), (1880); H. L. CLARK (1941 ); MORTENSEN (1928);
SIRVEN-VILLUENDA (1945).
Prof. 270-720 m
Cidaris papillata Leske, 1778
Ref: A. AGASSIZ (1880).
Prof. 3-645 m.
Género Calocidaris H. L. Clark, 1907
Calocidaris micans (Mortensen, 1903)
Ref: H. L. CLARK (1941); MORTENSEN (1928).
Prof. 170-600 m.
Género Eucidaris Pomel, 1883
Eucidaris tribuloides tribuloides (Lamark, 1816)
Ref: BOONE (1933); H. L. CLARK (1941); CORVEA ET AL (1990);
MORTENSEN (1928).
Prof. 0-800 m.
Género Stylocidaris Mortensen, 1909
Stylocidaris affinis (Philippi, 1845)
Ref: BONNE (1933); H. L. CLARK (1941); SIRVEN-VILLUENDA (1945).
Prof. 23 -100 m.
Stylocidaris lineata Mortensen, 1910
Ref: MORTENSEN (1910)
Prof. 70-560 m.
Equinoideos de Cuba
Sub Clase EUECHINOIDEA Bronn,1860
Infra clase ECHINOTHURIOIDEA Claus, 1880
Cohorte ECHINOTHURICEA Jensen,1981
Orden ECHINOTHUROIDA Claus, 1880
Familia ECHINOTHURIIDAE Thomson,1872
Género Araeosoma Mortensen, 1903
Araeosoma belli Mortensen, 1903
Ref: H. L. CLARK (1941); MORTENSEN (1910)
Prof. 130-1020 m.
Araeosoma fenestratum (Wyville-Thompson, 1872)
Ref: H. L. CLARK (1941)
Prof. 16-1180 m.
Género Hygrosoma Mortensen, 1903
Hygrosoma petenssil (A. Agassiz, 1880)
Ref: H. L. CLARK (1941)
Prof. 200-3700 m.
Familia PHORMOSOMATIDAE Jensen, 1981
Género Phormosoma W. Thomson, 1872
Phormosoma placenta sigsbei (A.Agassiz,1880)
Ref: A. AGASSIZ (1880); H. L. CLARK (1941); SIRVEN-VILLUENDA (1945).
Prof. 200-1800 m.
Infraclase ACROEDCHINOIDEA Smith, 1981
Cohorte DIADEMATACEA Duncan,1889
Orden DIADEMATOIDA Duncan,1889
Familia DIADEMATIDAE Gray,1855
Género Diadema Gray, 1825
Diadema antillarum (Philippi, 1845)
Ref: H. L. CLARK (1941)
Prof. 0-800 m
Género Astrophyga Gray, 1825
Astrophyga magnifica A. H. Clark ,1934
Ref: ESPINOSA, ABREU Y GOMEZ (1997)
Prof. 5-88 m.
Género Centrostephanus Peters, 1855
Centrostephanus longispinus rubricingulus H. L. Clark, 1921
Ref: A. AGASSIZ (1880)
Prof. 33-310 m.
Familia ASPIDODEMATIDAE Duncan,1889
Género Aspidodiadema A. Agassiz, 1879
Aspidodiadema jacobyi A. Agassiz, 1880
Ref: A. AGASSIZ (1880); H. L. CLARK (1941); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 170-720 m.
71
Abreu, Solís-Marín y Laguarda-Figueras
Género Plesiodiadema Pomel, 1883
Plesiodiadema antillarum (A.Agassiz, 1880)
Ref: A. AGASSIZ (1880); H. L. CLARK (1941)
Prof. 720-3000 m.
Orden PEDINOIDA Mortensen, 1939
Familia PEDINIDAE Pomel, 1883
Género Coenopidina A. Agassiz, 1869
Coenopedina cubensis A. Agassiz, 1869
Ref: MORTENSEN (1940)
Prof. 250-1200 m
Cohorte ECHINACEA Claus,1876
Super Orden STIRODONTA Jacleson,1912
Orden SALENIOIDA Delage y Herovard, 1903
Familia SALENIDAE L. Agassiz, 1838
Género Salenia Gray, 1835
Salenia goesiana Loven, 1874
Ref: A. AGASSIZ (1878, 1880); MORTENSEN (1935); SIRVEN-VILLUENDA (1945).
Prof. 90-540 m
Género Salenocidaris A. Agassiz, 1869
Salenocidaris profundi (Duncan, 1877)
Ref: H. L. CLARK (1941); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 220-3700 m.
Salenocidaris rarispina A. Agassiz, 1869
Ref: A. AGASSIZ (1880); H. L. CLARK (1941); SIRVEN- VILLUENDA (1945)
Prof. 250-3000 m.
Orden PHYMOSOMATOIDA Mortensen, 1904
Familia ARBACIIDAE Gray, 1855
Género Arbacia Gray, 1835
Arbacia punctulata (Lamarck, 1816)
Ref: H. L. CLARK (1933); SERAFY (1979); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 0-225 m.
Género Coelopleurus L. Agassiz, 1840
Coelopleurus floridanus A. Agassiz, 1871
Ref: A. AGASSIZ (1878), (1880); H. L. CLARK (1941)
Prof. 73-530 m
Género Habrocidaris A. Agassiz y H. L Clark, 1906
Habrocidaris scutata (A. Agassiz, 1880)
Ref: A. AGASSIZ (1880); H. L. CLARK (1941)
Prof. 920-1400 m.
12
Género Podocidaris A.Agassiz, 1869
Podocidaris sculpta A. Agassiz, 1869
Ref: A. AGASSIZ (1880); MORTENSEN (1935)
Prof. 8-730 m.
Superorden CAMARODONTA Jackson, 1912
Orden TEMNOPLEUROIDA Mortensen, 1942
Familia TEMNOPLEUROIDA A. Agassiz,1872
Género Trigonocidaris A. Agassiz, 1869
Trigonocidaris albida A. Agassiz, 1869
Ref: A. AGASSIZ (1878), (1880)
Prof. 70-720 m.
Orden ECHIONOIDA Claus, 1876
Familia ECHINIDA Gray, 1825
Género Echinus Linné, 1758
Echinus gracilis A. Agassiz, 1869
Ref: A. AGASSIZ (1878); MORTENSEN (1943)
Prof. 70-450 m.
Familia ECHINOMITRIDAE Gray, 1825
Género Echinometra Gray, 1825
Echinometra lucunter (Linnaeus, 1758)
Ref: A. AGASSIZ (1878); H. L. CLARK (1941)
Prof. 0-45 m.
Echinometra viridis A. Agassiz, 1863
Ref ¿HE “CLARK(1901), (11999)
Prof. 0-40 m.
Familia TOXOPNEUSTIDAE Troschel, 1872
Género Lytechinus A. Agassiz, 1863
Lytechinus variegatus carolinus A. Agassiz, 1863
Ref: ESPINOSA, ABREU Y GOMEZ (1997)
Prof. 0-75 m.
Equinoideos de Cuba
Lytechinus variegatus variegatus (Lamarck, 1816)
Ref: A. AGASSIZ (1880); H. L. CLARK (1941); CORVEA ET AL (1990)
Prof. 0-250 m.
Lytechinus williamsi Chesher, 1968
Ref: ABREU Y DEL VALLE (1998)
Prof. 5-92 m.
Género Tripneustes A. Agassiz, 1841
Tripneustes ventricosus (Lamarck, 1816)
Ref: A. AGASSIZ (1878); BOONE (1933); H. L. CLARK (1941); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 0-55 m.
1
Abreu, Solís-Marín y Laguarda-Figueras
Cohorte IRREGULARIA Latreille, 1825
Super Orden EOGNATHOSTOMATA Smith, 1984
Orden HOLECTYPOIDA Duncan, 1889
Sub Orden ECHINONEINA H. L. Clark, 1925
Familia ECHINONEIDAE Agassiz y Desor, 1847
Género Echinoneus Leske, 1774
Echinoneus cyclostomus Leske, 1778
Ref: AGUAYO (1945); FARFANTE (1959); H. L. CLARK (1933);SIRVEN-VILLUENDA (1945).
Prof. 5-570 m.
Superorden MICROSTOMATA Smith, 1984
Orden CASSIDULOIDA Claus, 1880
Familia ECHINONAMPADIDAE Gray, 1851
Género Echinolampas Gray,1851
Echinolampas depressa Gray, 1851
Ref: SERAFY (1979)
Prof. 37-310 m.
Género Conolampas A. Agassiz, 1878
Conolampas sigsbel (A. Agassiz,1878)
Ref: A. AGASSIZ (1878); H. L. CLARK (194] ); FARFANTE (1959); MORTENSEN (1948)
Prof. 130-800 m.
Orden CLYPEASTEROIDEA A. Agassiz,1872
Sub Orden CLYPEASTERINA A. Agassiz, 1872
Familia CLYPEASTERIDAE L. Agassiz, 1835
Género Clypeaster Lamarck, 1801
Clypeaster cyclopilus H. L. Clark, 1941
Ref: H. L. CLARK (1941); FARFANTE (1959); MORTENSEN (1948); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 70-460 m.
Clypeaster euclastus H. L Clark, 1941
Ref: H. L. CLARK (1941); FARFANTE (1959)
Prof. 36-530 m.
Clypeaster rosaceus (Linné, 1758)
Ref: H. L. CLARK (1941); CORVEA ET AL (1990); FARFANTE (1959)
Prof. 0-285 m.
Clypeaster subdepressus (Gray, 1825)
Ref: A. AGASsIz (1880); H. L. CLARK (1933); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 5-210 m.
Sub Orden SCUTELLINA Haeckel, 1896
Infra Orden FIBULARIINA Smith, 1984
Familia FIBULARIDAE Gray, 1825
Género Echinocyamus Von Phelsum, 1774
74
Equinoideos de Cuba
Echinocyamus grandiporus Mortensen, 1907
Ref: H. L. CLARK (1941); FARFANTE (1959); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 150-2500 m.
Echinocyamus macrostomus Mortensen, 1907
Ref: H. L. CLARK (1941); FARFANTE (1959)
Prof. 170-2286 m.
Infraorden LAGUNINA Mortensen,1948
Superfamilia SCUTELLIDEA Smith, 1984
Familia MELLITIDAE Stefanini,191 1
Género Mellita L. Agassiz, 1841
Mellita quinquiesperforata (Leske, 1778)
Ref: H. L. CLARK (1933); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 0-180 m.
Género Leodia Gray, 1852
Leodia sexiesperforata (Leske,1778)
Ref: H. L. CLARK (1933); CORVEA ET AL (1990); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 0- 60 m.
Género Encope L. Agassiz, 1840
Encope micheline L. Agassiz, 1841
Ref: FARFANTE (1959)
Prof. 3-90 m.
Serie ATELOSTOMATA Zittel, 1879
Orden HOLASTEROIDA Durham y Meluille, 1957
Familia POURTALESIIDAE A. Agassiz, 1881
Género Pourtalesia A. Agassiz, 1869
Pourtalesia miranda A. Agassiz, 1869
Ref: A. Agassiz (1878); H. L. Clark (1941); Farfante (1959) Sirven-Villuenda (1945)
Prof. 450-5850 m.
Orden SPATANGOIDA Claus, 1876
Suborden MICRASTERINA Fisher, 1966
Familia BRISSIDAE Gray, 1855
Género Brissus Gray, 1825
Brissus unicolor (Leske,1778)
Ref: FARFANTE (1959); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 0-240 m.
Género Brissopsis L. Agassiz, 1847
Brissopsis atlantica Mortensen, 1907
Ref: H. L. CLARK (1941); FARFANTE (1959); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 26-641 m.
75
Abreu, Solís-Marín y Laguarda-Figueras
Género Meoma Gray, 1851
Meoma ventricosa ventricosa (Lamark,1816)
Ref: A. AGASSIZ (1878); BONNE (1933); H. L. CLARK (1941 ); FARFANTE (1959);
SIRVEN-VILLUENDA (1945); CORVEA ET AL (1990)
Prof. 2-200 m.
Género Plethotaenia H. L. Clark, 1917
Plethotaena spatangoides (A. Agassiz, 1883)
Ref: H. L CLARK (1941); FARFANTE (1959); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 150-619 m.
Género Plagiobrissus Pomel, 1883
Plagiobrissus grandis (Gmelin,1788)
Ref: FARFANTE (1959). Prof. 2-330 m.
Género Rhinobrissus A. Agassiz, 1872
Rhinobrissus micrasteroides A. Agassiz, 1878
Ref: A. AGASSIZ (1878)
Prof. 148-330 m.
Familia LAVENIMIDAE Lambert, 1905
Género Homolampas A. Agassiz, 1874
Homolampas fragilis (A. Agassiz, 1869)
Ref: H. L. CLARK (1941); FARFANTE (1959); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 360-3550 m.
Suborden HEMIASTERINA Fisher, 1966
Familia HEMIASTERIDAE Clark, 1917
Género Hemiaster A. Agassiz y Desor, 1847
Hemiaster expergitus Loven, 1872
Ref: A. AGASSIZ (1880); H. L. CLARK (1941)
Prof. 380-4883 m.
Familia AEROPSIDAE Lambert, 1905
Género Aceste W.Thomson, 1877
Aceste bellidifera W.Yomson, 1877
Ref: H. L CLARK (1941)
Prof. 550-5220 m.
Familia SCHIZASTERIDAE Lambert, 1905
Género Schizaster L. Agassiz, 1836
Schizaster orbignyanus A. Agassiz, 1880
Ref: H. L. CLARK (1941); SERAFY (1979); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 26-500 m.
Género Agassizia Agassiz y Desor, 1847
Agassizia exentrica A. Agassiz, 1869
Ref: AGASSIZ (1878); MORTENSEN (1951)
Prof. 43-900 m.
76
Equinoideos de Cuba
Género Moira A. Agassiz, 1872
Moira atropos (Lamark, 1816)
Ref: BOONE (1933); FARFANTE (1959); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 0-445 m.
(INCERTA SEDIS)
Familia ASTEROSTOMATIDAE Pictet, 1857
Género Archaeopneustes Gregory, 1892
Achaeopneustes hystrix (A. Agassiz, 1880)
Ref: A. AGASSIzZ (1880); H. L. CLARK (1941 ); FARFANTE (1959); SIRVEN-VILLUENDA (1945)
Prof. 220-1610 m.
Género Linopneustes A. Agassiz, 1881
Linopneustes longispinus (A. Agassiz, 1878)
Ref: H. L. CLARK (1941); MORTENSEN (1951); SIRVEN-VILLUENDA (1945).
FARFANTE (1959). Prof. 55-710 m.
Género Paleopneustes A. Agassiz, 1873
Paleopneustes cristatus A. Agassiz, 1873
Ref: A. AGASSIZ (1878); H. L. CLARK (1941 ); FARFANTE (1959); MORTENSEN (1951)
Prof. 76-805 m.
Paleopneustes josephinae Loven, 1872
Ref: A. AGASSIZ (1878); H. L. CLARK (1941)
Prof. 350-436 m.
AGRADECIMIENTOS
Esta contribución es uno de los resultados del Proyecto de colaboración Cuba-México
“Estudio de los Equinodermos del caribe mexicano y de las costas cubanas”. Deseamos
expresar el más sincero agradecimiento al Dr. José Espinosa Saez por sus sugerencias y
orientaciones en la elaboración de este trabajo.
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78
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Nueva especie del género Janolus Bergh, 1884 (Mollusca: Nudi-
branchia) de Cuba y Costa Rica.
New species of the genus Janolus Bergh, 15884 (Mollusca: Nudi-
branchia) from Cuba and Costa Rica
Jesús Ortea* y José Espinosa**
*Departamento de Biología de Organismos y Sistemas. Laboratorio de Zoologia. Universidad
de Oviedo, Oviedo, España.
**Instituto de Oceanología, Ave. 1*n” 18406, e/ 184 y 186, Playa 12100, La Habana, Cuba.
Resumen
A partir de ejemplares de la costa Norte de Cuba y del Caribe de Costa Rica se decribe una
nueva especie de Janolus Bergh, 1884, caracterizada por el color blanco/crema del cuerpo , ri-
nóforos con papilas y laminillas, carúnculo onduloso y dientes radulares lisos.
Abstract
From specimens collected in the north coast of Cuba and Costa Rica Caribbean, it is des-
cribed a new species of the genus Janolus Bergh, 1884, characterized by the white/cream
background color in the body, rinophores with lamellae and papillae, ondulated caruncle and
radular teeth lack denticles.
Palabras clave: Mollusca, Nudibranchia, Janolus, Especie nueva, Cuba, Costa Rica.
Key words: Mollusca, Nudibranchia, Janolus, New species, Cuba Costa Rica.
INTRODUCCION
Las especies del género Janolus Bergh, 1884, viven por lo general sobre sustratos ri-
cos en briozoos arborescentes, que constituyen su alimento.
La única referencia previa sobre estos animales en nuestro área de estudio es la cita
como Janolus sp. (EDMUNDS Y JusT, 1985) de un ejemplar de Barbados con epiteilio ce-
ratal papiloso, sugiriendo en su artículo que podría tratarse de una especie no descrita.
Los muestreos regulares que venimos realizando en el Caribe de Costa Rica y costas
de Cuba, nos han proporcionado tres ejemplares de características similares a las descri-
tas por EDMUNDS Y JusT (1985) para el animal de Barbados y que resultó ser, efectivamente,
una especie nueva que describimos en el presente trabajo.
SISTEMATICA
ORDEN NUDIBRANCHIA Cuvier, 1817
Familia ARMINIDAE Tredale y O'Donoghue, 1923
Genero Janolus Bergh, 1884
79
Ortea y Espinosa
Janolus costacubensís especie nueva
(Figuras 1 y 2)
Referencias: Janolus sp. -EDMUNDS Y Just, 1985: p. 61, fig. 5C y figs. 6A y 6B.
Material: Miramar, costa Norte de La Habana (localidad tipo), 11 de noviembre de 1999, un
ejemplar de 4 mm (Holotipo), 4 de noviembre del 2000, un ejemplar de 35 mm; ambos recolecta-
dos entre 20 y 25 m de profundidad. Manzanillo, Limón, Costa Rica, 5 de abril del 2000, un ejem-
plar de 6 mm (Paratipo). Todos obtenidos a partir de raspados de sustrato rocoso. Holotipo en la co-
lección del Instituto de Oceanología, La Habana, Cuba; Paratipo en la del INBio, Costa Rica.
Descripción: Cuerpo de color crema, poco transparente, con una línea longitudinal de
manchas de color blanco nieve en el medio del dorso, interrumpida por una gran mancha
violácea en la región del corazón. Los flancos presentan también manchas blanco nieve de
tamaños y formas diferentes y hay puntos de igual color en la suela del pie. Los tres
ejemplares presentaron cuatro manchas blancas dorsales: las dos primeras anterior y pos-
terior al carúnculo rinofórico, la tercera en el centro del cuerpo, a la altura de los cerata de
mayor tamaño y la cuarta entre ésta y la papila anal, también blanca.
Tentáculos orales cortos y digitiformes, con un anillo rojo-violáceo en su zona media
y gránulos blancos en el tercio apical (Fig. 14). Los rinóforos tienen también una mancha
rojiza apical y los cerata de mayor tamaño subapical. Además, todo el borde del pie tiene
puntos de igual color.
Los cerata del velo, anteriores a los rinóforos, son los más simples y los que menos cam-
bian de forma al dilatarse o contraerse, son también menos globosos que los del dorso. To-
dos los cerata del cuerpo tienen papilas en su superficie y se unen al cuerpo por un delgado
pedúnculo. La epidermis transparente de los cerata deja ver la ramificacion digestiva in-
terna, de color crema, que llega hasta su zona media, donde se dilata (Fig. 1A). En los
cerata que flanquean la papila anal (Fig. 1D), la dilatación ocurre cerca del apice del ce-
rata, que a su vez está rodeado de papilas blancas superficiales. Los mayores cerata son los
del segundo grupo posterior a los rinóforos; midieron 15 mm en el ejemplar de 6 mm. En
el punto de inserción de estos grandes cerata se aprecia un conducto digestivo transversal,
de color pardo, que une las ramas digestivas de ambos lados del cuerpo.
Carúnculo inter-rinofórico (Fig. 1, A y B formado por 6-7 pliegues ondulosos. Visto
desde arriba parece una gruesa cinta ondulosa de pliegues irregulares.
Rinóforos (Fig. 1, A y C) con 3-4 gruesas laminillas en los 3/5 distales y papilas en los
2/5 basales; las laminillas se interrumpen por delante, pero no las papilas.
El pie carece de hendiduras en su borde anterior y tiene una delgada y corta cola pos-
terior, manchada de estrías blancas en el dorso. Hay una hilera longitudinal de puntos
blanco nieve en el medio de la suela y puntos rojizos espaciados, en los bordes.
A primera vista parece un animal sucio, con sedimento fino sobre él. No presenta au-
totomía con una manipulación mecánica moderada y sólo contrae o yergue los cerata.
Tampoco la presenta con el enfriamiento ni al sumergirlos en cloruro de magnesio. Ante
una manipulación violenta puede emitir una capa completa de mucus, como una muda, en
la que hay algunos cerata, pero éstos no se mueven.
80
Nueva especie de Janolus del Caribe
Figura 1. Janolus costacubensis, especie nueva: A. Parte anterior del dorso en un animal de 6
mm; B. Carúnculo; C. Rinóforo; D. Cerata próximo a la papila anal; E. Vista ventral.
Figure 2. Janolus costacubensis, new species: A. Anterior part of the dorsum in specimen 6 mm
long; B. Caruncle; C. Rhinophore; D. Cerata next to anal papilla; E. Ventral view.
81
Ortea y Espinosa
Las mandíbulas (Fig. 2B) son muy grandes para el tamaño del animal (450 um de
alto por 280 um de ancho, cada una), ocupan casi todo el ancho de la cabeza y son de
color cobre.
La fórmula radular en un ejemplar de 4 mm fue 11 x (11-R-11). Los dientes laterales
son ganchudos simples y de borde liso. La placa media es un bastón con una leve
muesca central (Fig. 2A).
Etimologia: costacubensis, unión de los nombres de los dos países donde ha sido re-
colectado, Costa Rica y Cuba.
DISCUSION
Tres especies de Janolus Bergh, 1884 con papilas en la superficie de los cerata, se co-
nocían hasta el momento en el Océano Atlántico: Janolus hyalinus (Alder y Hancock,
1854), Janolus comis (Marcus, 1955) y Janolus faustoi Ortea y Llera, 1988. Sus caracte-
res principales se pueden ver de forma comparada en ORTEA Y LLERA (1988) en la discu-
sión de J. faustoi . A ellas hay que añadir Janolus costacubensis especie nueva.
Estas cuatro especies atlánticas con papilas en el epitelio ceratal se pueden separar
con facilidad por la morfología de los rinóforos y agruparlas artificialmente por pares
por la estructura radular.
Figura 2. Janolus costacubensis: A. Dientes radulares (escala = 10 um); B. Mandíbula (escala =
100 um); C. Coloración lateral del cuerpo: b, blanco nieve; c, carmín (escala = 1 mm).
Figure 2. Janolus costacubensis: A. Radular teeth (scale = 10 um); B. Jaw (scale = 100 um);
C. Lateral colour: b, white; c, crimson (scale = 1 mm).
82
Nueva especie de Janolus del Caribe
- Con dientes laterales denticulados:
J. hyalinus, distribuida por las costas atlánticas y mediterráneas de Europa, además de
una cita en Nueva Zelanda (MILLER Y WILLAM, 1986). Tiene los rinóforos laminares, con
pliegues oblícuos irregulares. Los cerata presentan una violenta autotomía a la manipulación
mecánica y continúan moviendose con contracciones bruscas.
J. comis (Marcus, 1953), de las costas de Brasil. Rinóforos con papilas.
- Con dientes laterales lisos:
J. faustoi Ortea y Llera, 1988, citado en las islas Canarias y Madeira. Rinóforos con
gruesos cordones laterales doblados en vertice (<).
J. costacubensis, especie nueva, de Cuba y Costa Rica. Rinóforos con laminillas en su
mitad apical y papilosos en la mitad basal.
Los datos de nuestros animales coinciden plenamente con los del Janolus sp. de Bar-
bados estudiado por EDMUNDS Y JusT (1985), por lo que dichas islas serían la tercera lo-
calidad conocida de la nueva especie.
AGRADECIMIENTOS
Nuestro reconocimiento al Ministerio de Ambiente y Energía de Costa Rica por el
apoyo prestado a nuestras campañas de recolección, asi como a Yolanda Camacho, Leo-
poldo Moro y al grupo de parataxónomos de INBio, por su participación en ellas.
Parte de los resultados de este trabajo han sido obtenidos gracias al Programa de In-
ventario de los Moluscos Marinos del Caribe de Costa Rica, financiado por el Gobierno
de los Paises Bajos (Holanda)
BIBLIOGRAFIA
EDMUNDS, M. Y Just, H. 1985. Dorid, Dendronotid and Arminid Nudibranchiate Mo-
llusca from Barbados. Journal of Molluscan Studies, 51 : 52-63
MARCUS, ER. 1955. Opisthobranchia from Brazil. Boletin Faculdade de filosofia,
ciencias e letras Universidade de Sao Paulo, Zoologia 20 : 89-262
MARCUS, ER. 1958. On western Atlantic Opisthobranch Gastropods. American Museum
Novitates. 1906 : 1-82.
ORTEA, J. 1978. Cinco Opistobranquios nuevos para la fauna Ibérica. Boletín IDEA 23:
107-120.
ORTEA, J Y LLERA, E.. 1990. Una nueva especie de Janolus Bergh, 1884 (Mollusca: Nu-
dibranchia) dedicada a la memoria de Fausto Gonzalez. Publ. Ocas. Soc. Port. Malac.
11: 33-38.
83
Avicennia, 2000, 12/13: 84-86
Nueva especie del género Okenia Menke, 1830 (Mollusca: Nudi-
branchia) de Cuba
New species of the genus Okenia Menke, 1830 (Mollusca Nudi-
branchia) from Cuba
Jesús Ortea* y José Espinosa**
*Departamento de Biología de Organismos y Sistemas. Laboratorio de Zoologia. Universidad
de Oviedo, Oviedo, España.
**Instituto de Oceanología, Ave. 1*n* 18406, e/ 184 y 186, Playa 12100, La Habana, Cuba.
Resumen
A partir de ejemplares de la costa Norte de Cuba se decribe una nueva especie de Okenia
Menke, 1830, caracterizada por el color blanco nieve del cuerpo, el extremo de sus apéndices,
rinoforos y branquias naranja y por la longitud de las expansiones extrabranquiales.
Summary
From specimens collected in the nort coast of Cuba it is described a new species of the ge-
nus Okenia Menke, 1830, characterized by the background color white in the body, the
orange color in the distal región of the appendages, gills and rhinophores and by the very
large gills proccess.
Palabras clave: Mollusca, Nudibranchia, Okenia, especie nueva, Cuba.
Key words: Mollusca, Nudibranchia, Okenia, new species, Cuba.
INTRODUCCION
La taxonomía de las especies atlánticas del Género Okenia Menke, 1830, fue revi-
sada en VALDES Y ORTEA (1995). Más tarde, VALLÉS, VALDES Y ORTEA (2000) proponen
la sinonimia del género Thesia Edmunds, 1966 con el género Okenia, a partir del estudio
de ejemplares de Angola. De acuerdo con esa propuesta Okenia digitata (Edmunds,
1966) sería la novena especie atlántica del género.
En este trabajo describimos una nueva especie de Okenia recolectada en fondos rocosos
del Norte de Cuba, sometidos a fuertes corrientes, a 20 m de profundidad.
SISTEMATICA
ORDEN NUDIBRANCHIA Cuvier, 1817
Familia GONIODORIDIDAE H. y A. Adams, 1854
Género Okenia Menke, 1830
84
Ortea y Espinosa
Okenia miramarae especie nueva
(Figura 1)
Material examinado: Playa de 14-16, Miramar (localidad tipo), La Habana, Cuba, dos ejem-
plares de 4-5 mm en extensión recolectados en noviembre de 1999 a 20 m de profundidad. Holotipo
depositado en el Instituto de Oceanología, La Habana, Cuba.
Descripción: Cuerpo de color blanco nieve, con el ápice de las expansiones del
cuerpo, rinóforos y branquias, conspícuamente manchados de color naranja vivo. Ven-
tralmente el color es también blanco, aunque algo más hialino que el dorso.
El velo cefálico presenta cuatro apéndices de tamaño similar, dos anteriores y uno al
lado de cada rinóforo. En los laterales del cuerpo hay 2-3 apéndices, algo menores que los
de la cabeza y uno, extraordinariamente largo, a cada lado de la branquia; son tan largos
estos apéndices latero-branquiales que superan la longitud de la cola cuando el animal
se desplaza y los dirige hacia atrás (Fig. 1A). Por delante de la branquia hay un apéndice
de tamaño similar a los del velo, dispuesto perpendicularmente al cuerpo (Fig. 1B).
Rinóforos (Fig. 1C), con 3 laminillas en forma de copa en la mitad inferior y cinco tu-
bérculos en la mitad superior.
Branquia (Fig. 1B), formada por cuatro ramas unipinnadas y tres pedúnculos. El cen-
tral es más grueso y presenta dos ramas soldadas en un solo pie. Cada rama branquial
unipinnada presenta 5-6 laminillas espaciadas, con la región apical sin laminillas. Detrás
de la branquia el cuerpo presenta una mancha rosa violáceo.
La armadura labial (Fig. 1D) tiene uncinos largos y gruesos, del tamaño de los dien-
tes, con el borde cortante espatular o bífido, según la zona.
La fórmula radular del animal de 4 mm fue: 25 x (1-1-0-1-1); el diente lateral (Fig. 1E)
mide unas 70 um y presenta una apófisis basal posterior y 10-11 dentículos de tamaño
similar en el borde del gancho. El diente marginal (12 um) es unicúspide y muy simple.
Etimología: Okenia miramarae, toponímico, por estar situada la localidad tipo en el
barrio de Miramar, La Habana.
Discusión: La coloración y los largos apéndice laterobranquiales, diferencian con fa-
cilidad a Okenia miramarae, especie nueva, de las restantes especies atlánticas del gé-
nero. El apéndice vertical, anterior a la branquia, la relaciona con Okenia impexa Marcus,
1957 y O. cupella (Vogel y Schultz, 1970), especies anfiatlánticas citadas peviamente en
Cuba (VALDÉS Y ORTEA, 1995); sin embargo, estas dos especies tienen una coloración
muy diferente de O. miramarae y además, en O. impexa los apéndices laterales dismi-
nuyen de tamaño desde los rinóforos a la branquia y en O. cupella sucede lo contrario. La
rádula es otro caracter diferenciador ya que los dientes laterales de O. impexa y O. cupe-
lla tienen un apéndice basal anterior y otro posterior, mientras que O. miramarae sólo lo
tiene posterior. El número de filas de dientes es mayor en O. miramarae, 25 en un ejem-
plar de 4 mm, frente a 18 en O. impexa y 15 en O. cupella, en animales de tamaño similar.
En VALDES Y ORTEA (1995) se pueden ver tablas comparativas de las especies del gé-
nero que viven en el Atlántico.
85
Nueva especie de Okenia de Cuba
Figura 1. Okenia miramarae: A, vista dorsal del animal vivo (escala=1 mm). B, branquia. C, ri-
nóforo. D, uncinos de la armadura labial. E, dientes radulares lateral y marginal (escala=10 um).
Figure 1. Okenia miramarae: A, dorsal view of the living animal (scale bar=1 mm). B, gills. C,
rhinophore. D, labial rodlets. E, lateral and marginal radular theets (scale bar=10 um).
BIBLIOGRAFIA
VALDES, A. Y ORTEA, J. 1995. Revised Taxonomy of Some Species of the Genus Okenia Menke, 1830 (Mollusca:
Nudibranchia) from the Atlantic Ocean, with the Description of a New Species. The Veliger, 38(3): 223-234.
VALLES, I., VALDÉS,A. Y ORTEA, J. 2000. On the phanerobranch dorids of Angola (Mollusca: Nudibranchia): a
crossroads of temperate and tropical species. Zoosystema 22 (1): 15-31.
86
Avicennia, 2000, 12/13: 87-90
Nueva especie del género Thuridilla Bergh, 1872 (Mollusca: Sa-
coglossa) de Cuba y Costa Rica
New species of of the genus Thuridilla Bergh, 1872 (Mollusca:
Sacoglossa) from Cuba and Costa Rica
Jesús Ortea* y José Espinosa**
*Departamento de Biología de Organismos y Sistemas. Laboratorio de Zoologia. Universidad
de Oviedo, Oviedo, España.
**Instituto de Oceanología, Ave. 1*n” 18406, e/ 184 y 186, Playa 12100, La Habana, Cuba.
Resumen
A partir de ejemplares de la costa Norte de Cuba y del Caribe de Costa Rica se decribe una
nueva especie de Thuridilla Bergh, 1874, caracterizada por el color negro del cuerpo, sin
manchas amarillas irregulares y los dientes radulares con anchos dentículos.
Abstract
From specimens collected in the nort coast of Cuba Costa Rica Caribbean, it is described
a new species of the genus Thuridilla Bergh, 1874, characterized by the background color
black in the body and radular teeth with wide denticles.
Palabras clave: Mollusca, Sacoglossa, Thuridilla, Especie nueva, Cuba, Costa Rica..
Key words: Mollusca, Sacoglossa, Thuridilla, New species, Cuba,Costa Rica..
INTRODUCCION
El género Thuridilla Bergh, 1872, redefinido y separado recientemente de Elysia
Risso, 1818 (JENSEN, 1992; GOSLINER, 1995) comprende una veintena de especies de las
cuales sólo dos viven en el Atlántico: Thuridilla hopei (Verany, 1853) exclusiva del Me-
diterráneo y Thuridilla picta (Verrill, 1901), distribuida por el Caribe y las islas macaro-
nésicas del Atlántico Este (ORTEA, LUQUE Y TEMPLADO, 1988).
Nuestros trabajos sobre los Sacoglossos del Atlántico Americano incluyen hasta el
momento la descripción de dos especies nuevas de la familia Elysiidae: Elysia pratensis
Ortea y Espinosa, 1996 y Elysia patagonica Muniain y Ortea, 1998. E. pratensis pre-
senta unos rinóforos cónicos, de base ancha, poco frecuentes en el género y similares a los
de una nueva especie de Thuridilla Bergh, 1872, con el cuerpo conspicuamente coloreado,
que hemos recolectado durante los muestreos regulares con escafandra autónoma que
venimos realizando en el Caribe de Costa Rica y en las costas de Cuba. De la descrip-
ción de esta singular especie nos ocupamos en el presente trabajo.
87
Ortea y Espinosa
SISTEMATICA
ORDEN SACOGLOSSA Bergh, 1876
FAMILIA Elysiidae H. y A. Adams, 1854
Género Thuridilla Bergh, 1872
Thuridilla mazda especie nueva
(Lámina 1)
Material examinado: Naútico de La Habana (localidad tipo), septiembre de 1999, un ejemplar
de 35 mm (Holotipo) recolectado en zona arrecifal pobre en vegetación a 20 m de profundidad. Man-
zanillo, Limón, Costa Rica, abril de 2000, un ejemplar de 6 mm recolectado emergente de un ras-
pado sobre sustrato rocoso a 20 m. Holotipo depositado en el IDO, La Habana, Cuba.
Descripción: Cuerpo de color negro, con el borde de los parapodios coloreado con lla-
mativas áreas semilunares que alternan con áreas negras. Desde el borde y hacia la re-
gión ventral, cada una de estas áreas coloreadas contiene medias lunas apiladas de color
amarillo, naranja, azul y naranja (Lámina 1); en la región posterior de los parapodios,
cerca de la cola, el borde es solo naranja y en la región anterior del ejemplar de 6 mm se
forma un dibujo que parece un 3 invertido que se continúa por una estría del mismo co-
lor que llega hasta el morro de la cabeza. El interior de los parapodios es negro uniforme,
con una llamativa estría azul en la región caudal y manchitas naranja al inicio del área
cardiaca. El borde de los parapodios es levemente onduloso, encajando las ondulaciones
de cada parapodio en su opuesto. En general, la coloración de los dos ejemplares sigue el
mismo patrón, siendo más compleja en el de mayor tamaño (6 mm).
Rinóforos cortos y de base ancha, negros en su mitad ventral (anterior) y blancos con
una mancha azul apical en la dorsal (posterior). La cabeza y la nuca son blancas, con una
mancha naranja entre los rinóforos; en la base de éstos se sitúan los ojos. No se han apre-
ciado vasos en el área cardiaca
La rádula (Lam. 1D-F) del ejemplar de 6 mm presentó 5 dientes en la serie ascen-
dente (dorsal), 9 en la descendente (ventral) y 4 en el asca. Los dientes del asca se enro-
llan en una vuelta y son tetraédricos, sin cúspides. Los dientes de la serie ascendente es-
tán fuertemente denticulados. La apófisis de inserción (media) es bífida y se dispone en po-
sición media y perpendicular al eje mayor del diente. La apófisis posterior también es bí-
fida. La reducción de los dientes en la serie descendente se hace de forma regular y pro-
gresiva, siendo el tamaño del último diente (9) aproximadamente la mitad del primero.
Etimología: Thuridilla mazda, especie nueva, en recuerdo de nuestro vehiculo
Mazda 626 Glx del año 1987, con el que recorrimos 198.000 kms por las carreteras de Cuba,
sin piezas de repuesto, realizando nuestras campañas de colecta.
Discusión: Solo una especie del género Thuridilla Bergh, 1874, tiene en el Atlántico
tropical una coloración con la que puede ser comparada Thuridilla mazda, especie
nueva: Thuridilla picta (Verrill, 1901), distribuida en ambas orillas (ORTEA, LUQUE Y
88
Nueva especie de Thuridilla del Caribe
Lamina 1.
Thuridilla mazda, especie nueva.
A, animal de Costa Rica.
B, ejemplar de Cuba
(barras de escala = 1 mm).
C, coloración del cuerpo en 7. mazda
(izquierda) y 7. picta (derecha).
D, diente radular de la serie ascendente
(barras de escala = 25 um ).
E, asca.
F, esquema de la reducción progresiva
de los dientes descendentes.
Plate 1
Thuridilla mazda new species.
A, specimen from Costa Rica.
B, specimen from Cuba.
(scale bar = 1 mm).
C, body coloration of T. mazda (left)
and T. picta (rigt).
D, radular teeth of the ascending limb
(scale bar = 25 um).
E, ascus.
F, progresive reduction in descending
teeth.
89
Ortea y Espinosa
TEMPLADO, 1988). En las dos especies la coloración de fondo del cuerpo es negra y en am-
bas aparecen manchas de color amarillo, naranja, blanco y azul, pero la combinación de
los colores es muy diferente (Lam. 1C ); existiendo además en 7. picta el color rojo. Los
rinóforos son también muy distintos en ambas especies, cilíndricos y alargado en 7. picta
y cónicos, cortos y de base ancha en 7. mazda, con un diseño de color muy distinto. En adi-
ción, la rádula es bien diferente y un animal de 7. picta casi tres veces mayor (15 mm), pre-
senta 16 dientes en la rádula y 8 en el asca frente a 14 dientes y 4 en el asca en un ejem-
plar de 6 mm de 7. mazda, especie nueva.
En THOMPSON (1977, Lam 1f, figs. 26g y 27c, d y e) se puede ver una buena ilustración
en color de 7. picta y dibujos de los animales y de la rádula.
JENSEN (1992) redefine las características del género Thuridilla describiendo los ri-
nóforos como “Larger and always rolled. Their bases almost meet mediodorsally on the
head”. Este tipo de rinóforos están presentes en las especies conocidas del género hasta el
presente, incluidas las descritas y revisadas por GOSLINER (1995). Thuridilla mazda tiene
unos rinóforo cónicos, de base ancha en relación al ápice, muy diferentes de los que pre-
sentan todas las especies ya descritas.
AGRADECIMIENTOS
Nuestro más sincero agradecimiento a Yolanda Camacho, Leopoldo Moro, Manuel Ca-
baller y al grupo de parataxónomos del INBio, por su participación en las campañas de re-
colección y el aporte de material. Los resultados obtenidos en este trabajo forman parte del
programa de Inventario de los Moluscos Marinos del Caribe de Costa Rica, financiado por
el Gobierno de los Paises Bajos y realizado con el apoyo del MINAE de Costa Rica.
BIBLIOGRAFIA
GOSLINER, T. 1995. The genus Thuridilla (Opisthobranchia: Elysiidae) from the tropical Indo-Pacific, with a re-
vision of the Phylogeny and systematic of the Elysiidae. Proced. Calif. Acad. Sciences 49(1): 1-54.
JENSEN, K. R. 1992. Anatomy of some Indo-Pacific Elysiidae (Opisthobranchia: Sacoglossa) (=Ascoglossa)
with a discussion of the generic division and Phylogeny. J. moll. Stud. 58: 257-296.
MARCUS, E. Y MARCUS, E. 1967. Tropical American opisthobranchs. Studies in tropical Oceanography, number
6, 1-256.
MARCUS, Ev. 1980. Review of Western Atlantic Elysiidae (Opisthobranchia Ascoglossa) with a description of
a new Elysia species. Bull. of Marine Science 30 (1): 54-79
ORTEA, J, LUQUE, A. Y TEMPLADO, J. 1988. Elysia picta Verrill, 1901 and Geitodoris pusae (Marcus, 1955),
two amphiatlantic opsthobranch gastropods. J. moll. Stud. 54: 243-247.
THOMPSON, T. E. 1977. Jamaican Opisthobranch Molluscs 1. J. moll. Stud. 43: 93-140.
90
Avicennia, 2000, 12/13: 91-94
Datos anatómicos de Prunum holandae (Mollusca: Neogastro-
poda: Marginellidae)
Anatomycal characters of Prunum holandae (Mollusca: Neogas-
tropoda: Marginellidae)
José Espinosa* y Jesús Ortea**
* Instituto de Oceanología, Avda 1* n* 18406, E 184 y 186, Playa, La Habana, Cuba.
** Departamento de Biología de Organismos y Sistemas, Laboratorio de Zoología, Universidad
de Oviedo, España.
Resumen
Se describen y figuran los primeros datos anatómicos de Prunum holandae Espinosa y Or-
tea, 1999, los cuales incluyen la coloración externa del animal vivo, aspectos de la anatomia
interna y la rádula. Estos caracteres se comparan con las especies del género afines, de
acuerdo con la literatura disponible.
Abstract
The first anatomycal caracters of Prunum holandae Espinosa y Ortea, 1999 are described,
this included the external coloration of the alive animal, some aspects of the internal anatomy
and the radula. Acording with the avalable literature this caracters are compared with the
asociated species of the genus.
Palabras clave: Gastropoda, Marginellidae, Prunum holandae, anatomía, Costa Rica.
Key words: Gastropoda, Marginellidae, Prunum holandae, anatomy, Costa Rica.
INTRODUCCION
Como resultado del inventario de moluscos marinos del Parque Natural Cagúitas -
Gandoca, en el Mar Caribe de Costa Rica, propusimos en un artículo anterior (ESPINOSA
Y ORTEA, 1999) una nueva especie de marginélido, Prunum holandae, nombrada en ho-
nor de Holanda, cuyo Gobierno patrocina estos estudios. Dicha descripción original estuvo
basada en tres conchas, dos procedentes de los Cayos Limón, Isla San Blas, Panamá y
una de Punta Ubitas, Manzanillo, Limón, Costa Rica. La recolecta en Manzanillo de un
ejemplar vivo de esta especie, en el curso de una de las campañas del proyecto, permite
aportar los primeros datos anatómicos de P. holandae.
SISTEMATICA
Familia MARGINELLIDAE Fleming, 1828
Género Prunum Herrmannsen, 1852
91
Espinosa y Ortea
Prunum holandae Espinosa y Ortea, 1999
(Figura 1)
Material examinado: Un ejemplar procedente del arrecife coralino situado frente a Manzani-
llo, Costa Rica, a 12 m de profundidad (02/04/2000). Concha de 20 mm de largo y 11,6 mm de ancho.
El animal fue mantenido en acuario y fotografiado.
DATOS ANATOMICOS
Animal de color pardo-naranja, semejante a la concha, con manchas claras y líneas
blanco nieve y blanco hialino, en la parte anterior y principalmente hacia los bordes laterales
del pie. Sobre el sifón y tentáculos hay también manchitas irregulares y finas líneas del
mismo color (Fig. 1, arriba).
Las partes blandas del animal fijado en alcohol al 70% presentan una coloración gris
azulada del manto sobre las visceras (Fig. 1A), en el lado izquierdo. La branquia y el os-
fradio son casi iguales (Fig. 1C), aunque el osfradio la supera en anchura en la zona del ter-
cio apical; la coloración de ambos es grisácea. El osfradio tiene forma de corbata y se
dispone por debajo de la branquia.
La rádula (Fig. 1B) consta de 49 placas de unas 200 um de ancho. Las placas son asi-
métricas y presentan 14 cúspides en cada una de ellas, 7 y 6 a cada lado de la cúspide
central. La más pequeña de las cúspides es la del centro, con las dos más grandes a cada
lado. Vista en conjunto, las cúspides del lado con seis decrecen regularmente de tamaño
hacia el borde de la placa, mientras que las del lado con siete cúspides lo hacen a partir de
la tercera cúspide. El borde de inserción de las placas es curvo.
DISCUSION
Prunum holandae fue comparado en su descripción original con Prunum roosevelti
(Bartsch y Rehder, 1939), de Old Providence, Las Bahamas, de la cual se separa facilmente
por las características de su concha. Lamentablemente no hemos encontrado ninguna re-
ferencia sobre la coloración del animal ni de la anatomía de P. roosevelti, especie que ha
sido señalada (ABBOTT, 1974; ABBOTT Y DANCE, 1982) como una posible forma de color
de Prunum carneum (Storer, 1937), criterio que hemos rechazado anteriormente (ESPINOSA
Y ORTEA, 1999). Según las figuras del animal de P. carneum que ofrecen ABBOTT Y
DANCE (1982), por la coloración del animal se puede distinguir a P. holandae de esta es-
pecie, aunque muestran patrones de color en general semejantes, cuya principal diferen-
cia es la falta de manchas blanco hialino en la figura de ABBOT Y DANCE (1982), tal vez
como un posible reflejo de ser especies muy relacionadas entre si. Sin embargo, todas
las rádulas atribuidas al grupo de P. carneum en COOVERT Y COOVERT (1990) tienen más
de 20 cúspides en las placas (de la 20 a la 26), mientras que P. holandae presenta solamente
14 en la placa 24 (Fig. 1B), por lo que la rádula es un carácter anatómico que justifica
aún más la separación de estas especies.
92
Anatomía de Prunum holandae
Figura 1: Prunun holandae. Animal vivo y anatomía. A: Aspecto en alcohol: am, amarillo; az,
azul; r, rosado. B, placa radular (escala=100 um). C: Anatomía: b, branquia; e, esófago; gd, glán-
dula digestiva; o, osfradio; s, sifón; se, saco esofágico.
Figure 1: Prunun holandae. Living animal and anatomy. A, specimen in alcol: am, yellow; az,
blu; r, pink. B, radular plate (scale bar=100 um). C: Anatomy: b, ctenidium; e, oesophagus; gd,
digestive gland; o, osphradie; s, siphon; se, oesophagic sac.
93
Espinosa y Ortea
AGRADECIMIENTOS
Nuestro reconocimiento a Leopoldo Moro por la realización de la fotografía y a Yo-
landa Camacho, y al grupo de parataxónomos del Laboratorio de Malacología del IN-
Bio, Costa Rica, por su participación en las campañas de recolección. Los resultados de
este trabajo se han obtenido dentro del programa de Inventario de Moluscos Marinos del
Caribe de Costa Rica, financiado por el Gobierno de los Paises Bajos (Holanda) con el
apoyo del MINAE de Costa Rica.
BIBLIOGRAFIA
ABBOTT, R. T. 1974. American Seashells. Second Edition. Van Nostrand Reinolds Co. New York, 663 pags.
ABBOTT, R. T. Y DANCE, S. P. 1982. Compendium of Seashells. E. P. Dutton Inc. New York, 411 pags.
BARTSCH, P. Y REHDER, H. A. 1939. Mollusks Collected on The Presidential Cruise of 1938. Smithsonian Mis-
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COOvVERT, G. A. Y COOVERT, H. K. 1990. A study of marginellid radulae, Part 1: Type 6 Radula, Prunum / Vol-
varina Type. Marginella Marginallia, 8(1-6), 9(1-6): 1 - 68.
ESPINOSA, J. Y ORTEA, J. 1999. Descripción de nuevas marginelas (Mollusca: Neogastropoda: Marginellidae) de
Cuba y del Caribe de Costa Rica y Panamá. Avicennia 10/11: 165-176.
94
Avicennia 2000, 12/13: 95-114
Descripción de un género y once especies nuevas de Cystiscidae
y Marginellidae (Mollusca: Neogastropoda) del Caribe de Costa
Rica
New genus and eleven new species of Cystiscidae and Marginelli-
dae (Mollusca: Neogastropoda) from the Costa Rica Caribbean
José Espinosa* y Jesús Ortea**
* Instituto de Oceanología, Avda 1* n*” 18406, E 184 y 186, Playa, La Habana, Cuba.
** Departamento de Biología de Organismos y Sistemas, Laboratorio de Zoología, Universidad
de Oviedo, España.
Resumen
Descripción de un género y once especies nuevas de las familias Cystiscidae y Margi-
nellidae procedentes del mar Caribe de Costa Rica con datos de los animales vivos y de la
anatomía interna de algunas especies.
Abstract
A new genus and eleven new species of the Cysticidae and Marginellidae, found in the
Costa Rica Caribbean sea is described. Anatomycal dates from the living animal and internal
features of some species are given.
Palabras clave: Cystiscidae, Marginellidae, nuevo género, nuevas especies, Costa Rica.
Key words: Cystiscidae, Marginellidae, new genus, new species, Costa Rica.
INTRODUCCION
En trabajos anteriores (ESPINOSA Y ORTEA, 1999a y b) publicamos los primeros datos
sobre la familia Marginellidae en el Caribe de Costa Rica a partir del material recolectado
en otoño de 1999, dentro del proyecto de inventario de Moluscos Marinos auspiciado
por el Gobierno de Holanda. Tres especies nuevas, muy características y de tamaño superior
a los 7 mm fueron descritas en dichos artículos: Prunum holandae, Volvarina socoae e Hya-
lina chicoi, la primera en homenaje al patrocinador y las dos restantes dedicadas a miem-
bros del equipo de parataxónomos de INBio que participa en el proyecto.
En campañas posteriores, realizadas en abril y octubre del 2000 en el marco del citado
proyecto, se recolectaron nuevos ejemplares de las especies ya descritas junto a otras de
talla menor de 5 mm, que no fueron estudiadas inicialmente, pertenecientes en su mayor
parte a la familia Cystiscidae, próxima a Marginellidae.
En este trabajo describimos un género y siete especies nuevas de Cystiscidae y cuatro
especies nuevas de Marginellidae. Todas las descripciones se realizan a partir de anima-
les recolectados vivos cuyas anatomías se estudian en detalle en varias de las especies.
Las Instituciones donde se deposita el material tipo se indican como: INBio (Insti-
tuto Nacional de Biodiversiad, Costa Rica), IDO (Instituto de Oceanologia, Cuba).
95
Espinosa y Ortea
SISTEMATICA
Familia CYSTISCIDAE Stimpson, 1865
Subfamilia PLESIOCYSTISCINAE Coovert y Coovert, 1995
Genero Plesiocystiscus Coovert y Coovert, 1995
Plesiocystiscus genecoantespecie nueva
(Lámina 1. Figura 1)
_ Material examinado: Tres ejemplares recolectados vivos (10/2000) en Manzanillo (localidad
tipo), Caribe de Costa Rica, a unos 25 m de profundidad. Holotipo (22 mm de largo y 14 mm de
ancho. Figura 1) depositado en el INBio, Costa Rica. Los otros dos ejemplares de 17 mm de largo
aparentan ser inmaduros a juzgar por el desarrollo de la concha.
Figura 1. Plesiocystiscus genecoani (escala=1mm)
Descripción: Concha lisa y pulida
(Fig. 1), de tamaño pequeño, de forma
subcilíndrica, con el extremo anterior
aguzado y el posterior ancho y apla-
nado. Columela con seis pliegues, los
cuatro anteriores mas marcados que
los dos posteriores que aparecen
como débiles liras parietales. El la-
brum es simple, poco engrosado pero
no cortante, sin dentículos internos;
abertura casi tan larga como la con-
cha, estrecha en su porción posterior
y algo más ancha en la anterior. Callo
parietal muy débil. Color blanque-
cino, cristalino.
El animal vivo (Lam. 1) presenta el
sifón y los tentáculos de la cabeza de
color blanco hialino, sin manchas. Pie
blanco hialino, con una mancha ama-
rilla en cada uno de los ángulos ante-
riores y una mancha triangular de
igual color sobre la cola. El animal
dentro de la concha muestra dos gran-
des áreas irregulares de color rojo-violáco con manchas redondeadas amarillas, una en
la mitad anterior y otra en la posterior; entre estas dos áreas se dibuja una red irregular de
lineas rojizas y alguna manchita amarilla. El interior de la espira es rojo violáceo uni-
forme. Los tres ejemplares presentaron idéntica coloración.
Etimología: Nombrada en honor del eminente malacólogo norteamericano Dr. Eu-
gene V. Coan, activo participante en el inventario de los moluscos marinos del Pacífico de
Costa Rica y como homenaje a su contribución al estudio de los marginelidos americanos.
96
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
Discusión: Por la forma general de la concha Plesiocystiscus genecoani, especie
nueva, recuerda a Plesiocystiscus politulus (Dall, 1919), del Océano Pacífico de Ame-
rica del Norte (de Santa Barbara, California, a Baja California (ROTH Y COAN, 1968)), la
cual difiere por ser de tamaño mayor (unos 3 mm de largo) y tener la espira algo más
elevada, no aplanada. Plesyocistiscus larva (Bavay, 1922) (=Plesiocystiscus bocasensis Ols-
son y Mcginty, 1958), según ROTH Y CLOVER (1977), del Caribe de Panamá, Plesyocistiscus
abbottii (Jong y Coomans, 1988), descrito de Aruba y Plesyocistiscus jansseni (Jong y Co-
omans, 1988) de Curacao, son de tamaños y formas diferentes.
Subfamilia PERSICULINAE Coovert y Coovert, 1995
Género Gibberula Swainson, 1840
Las cuatro especies nuevas que describimos a continuación se pueden diferenciar a
simple vista por la coloración de la cabeza y región posterior del pie (Lamina 1, centro).
1-Cabeza negra con el morro blanco nieve. Tentáculos hialinos con una mancha basal amarilla.
Sin manchas en la región posterior del pie. Gibberula sierrai, especie nueva.
2-Cabeza blanca, con una mancha naranja a cada lado del morro y otra cerca del ojo. Región pos-
terior del pie con dos manchas triangulares amarillas. Gibberula mariot, especie nueva.
3-Cabeza blanca. Tentáculos con una mancha naranja en su zona media. Región posterior del pie
con una banda negra llena de manchas naranja. Gibberula ubitaensis, especie nueva.
4-Cabeza hialina con manchas naranja y blanco nieve. Tentáculos con manchas naranja. Región
posterior del pie con una banda hialina llena de manchas naranja. Gibberula bribri, especie nueva.
Gibberula ubitaensis especie nueva
(Lámina 1, Figura 2)
Material examinado: Tres ejemplares recolectados vivos (10/99) en Punta Ubita (localidad
tipo), Manzanillo, Caribe de Costa Rica, a unos 12 - 15 m de profundidad. Holotipo: (235 mm de
largo y 16 mm de ancho. Figura 2) depositado en el INBio, Costa Rica.
Descripción: Concha lisa y pulida (Fig. 2A), de forma suboval (068 relación an-
cho/largo), con el extremo posterior redondeado y el anterior algo aguzado. Presenta
cuatro pliegues columelares, los dos anteriores más desarrollados que los posteriores,
siendo el cuarto muy débil. Callo parietocolumelar notable. El labrum (parcialmente roto
en el Holotipo) es delgado en su borde libre, de perfil ligeramente excavado en su parte me-
dia y se inserta en la espira casi al final de la protoconcha. Interior de la abertura con po-
cas liras (5 en el Holotipo), muy débiles y situadas a la altura de los pliegues columelares.
Color uniforme, blanco hialino.
Animal de cabeza blanca, con una mancha naranja en cada tentáculo (Lamina 1A). Pie
blanco, con bandas negras repletas de manchas redondeadas de color naranja, alternando
con áreas blancas en los laterales y en la región medio dorsal posterior. Animal en el in-
terior de la concha con una mancha ventral de color verde en forma de J, delimitada par-
97
Espinosa y Ortea
Figura 2. Gibberula ubitaensis especie nueva: A, concha (Holotipo). B, vista dorsal y lateral de
una placa radular (escala= 10 um). C, glándula de Leiblein (cl= conducto); r= saco rádular.
Figure 2. Gibberula ubitaensis new species: A, shell (Holotipe). B, dorsal and lateral view of ra-
dular plate (scale bar= 10 um). C, gland of Leiblein, (cl=duct); r= radular sac.
cialmente por grandes manchas naranja sobre fondo negro. El mismo tipo de manchas
negras y naranja aparecen en el lateral izquierdo y en la espira.
Branquia y osfradio muy estrechos, situados en posición media del cuerpo y perpen-
diculares al pie. La branquia tiene laminillas de grosor medio que se estrechan cerca de su
inicio; se contabilizan 15 en el lado izquierdo del animal y dos por cada tres del osfradio.
El osfradio supera a la branquia por su extremidad distal y se dobla hacia la cabeza.
Glándula de Leiblein sacular, con una superficie secretora larga visible por el lado dere-
cho del animal, es algo transparente y se ve un fino conducto interior rectilíneo (Fig 2C).
Las rádulas de dos ejemplares de 2 mm y 2, 2 mm presentaron 127 y 137 placas, res-
pectivamente; se disponen en doble voluta en el saco. Las placas (Fig. 2 B) miden 10-12 um
de ancho por 12-15 um de alto y tienen una cúspide central y dos laterales menores que ella,
además de la marginal.
Etimologia: Topónimico dedicado al punto geográfico de colecta, Punta Ubita,
Manzanillo, Limón, Costa Rica.
Discusión: Por su tamaño y la forma general de la concha, Gibberula ubitaensis, es-
pecie nueva, puede ser comparada con Gibberula lavalleana (d'Orbigny, 1842), de la
98
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
cual se separa por el patrón de color del animal y por su rádula, de acuerdo con datos
propios, no publicados, además de caracteres de la concha como son la espira saliente y
las liras numerosas (mas de 12) en G. lavalleana.
Otras especies del género descritas para el área malacológica caribeña-antillana, cuyos
animales se desconocen y de concha diferente son: Gibberula minuta (Pfeiffer, 1840),
Gibberula minima (“Guilding” Sowerby, 1847), Gibberula evadnae (Dall y Simpson,
1901), Gibberula fernandinae (Dall, 1927) y Gibberula ocellus (Dall, 1927).
Gibberula larva (Bavay, 1922) (= Gibberula bocasensis Olsson y McGinty, 1958,
según ABBOT, 1974) son, probablemente, especies de Plesiocystiscus Coovert y Coovert,
1998).
Gibberula sierrai especie nueva
(Lámina 1. Figura 3)
Material examinado: Dos ejemplares recolectados vivos (10/2000) en Punta Mona (localidad
tipo), Manzanillo, Mar Caribe de Costa Rica, entre 10 y 15 m de profundidad. Holotipo: (20 mm
de largo y 14 mm de ancho. Figura 3) depositado en el INBio. Paratipo en el IDO.
Descripción: Concha lisa y pulida, cristalina en seco, de forma suboval ancha (0772
relación ancho/largo), con el extremo posterior redondeado y el anterior más aguzado.
Presenta seis pliegues columelares, los
cuales disminuyen gradualmente en desa-
rrollo de anterior a posterior; los tres últi-
mos son muy poco marcados, sobre todo el
más posterior, apenas visible. El labrum
es relativamente engrosado y de perfil
suave en el hombro de la vuelta. Sobre el
labio palatal, en el interior de la abertura,
hay 7 liras algo irregulares, dispuestas al
nivel de la altura de los pliegues de la co-
lumela. Una octava lira, inmersa en la
concha, se puede observar con ilumina-
ción por transparencia. Color uniforme,
blanquecino/ transparente.
El animal vivo (Lam. 1), tiene la ca-
beza negra con el morro blanco nieve y
los tentáculos hialinos con una mancha
amarilla y otra negra en su base, sobre
cada ojo. Sifón con la mitad derecha de
color negro. Pie hialino, con grandes
manchas redondeadas blanco nieve sobre
ENT los laterales que alternan con grupos de
manchitas negras y naranja; región poste-
Figura 3. Gibberula sierrai (escala=1 mm) rior del pie sin manchas. El animal dentro
99
Espinosa y Ortea
de la concha presenta una zona central cuadrangular de color verde con manchas circulares
naranja, rodeada en tres de sus lados (anterior, derecho y posterior) por una cresta irregular
de color negro que a su vez presenta manchas naranja en el mayor de sus lóbulos. El in-
terior de la espira es negro con manchas naranja y verdes. El mayor número de manchas
naranja que es posible contar en el dorso, siguiendo una línea longitudinal o transversal es
de 6-7.
Etimología: Nombrada en honor del Dr. Luis M. Sierra, ictiólogo y profesor de la
Universidad Nacional de Costa Rica, como reconocimiento por su dedicación al estudio
de la ictiofauna de los arrecifes coralinos de Manzanillo.
Discusión: A grandes rasgos Gibberula sierrai, especie nueva, recuerda a Gibberula
bribri, especie nueva, descrita más adelante, la cual es de tamaño menor, de espira casi plana
con el labrum elevado hacia el hombro de la vuelta y sólo cinco pliegues columelares.
Además, G. bribri tiene un patrón de color mucho más elaborado y complejo a pesar de
ser animales de menor tamaño.
Gibberula bribri especie nueva
(Lámina 1, Figura 4)
Material examinado: Dieciseis ejemplares recolectados vivos (10/2000) en Punta Mona (lo-
calidad tipo), Manzanillo, Mar Caribe de Costa Rica, entre 10 y 15 m de profundidad. Holotipo
(185 mm de largo y 12 mm de ancho. Figura 4) depositado en el INBio, Costa Rica. Paratipos: (185
mm de largo y 115 mm de ancho) depositado en el IDO, La Habana, Cuba; (177 mm de largo y 105
mm de ancho) depositado en el Museo de Cincias Naturales de Tenerife, islas Canarias; y (17 mm
de largo y 105 mm de ancho) depositado en el IN-
Bio. Todos procedentes de la localidad tipo.
Descripción: Concha lisa y pulida, crista-
lina, de forma suboval ligeramente ancha
(063 relación ancho/largo), con el extremo
posterior ancho y suavemente redondeado y
el anterior marcadamente más aguzado (Fig.
4). Presenta cinco pliegues columelares, los
cuales disminuyen en desarrollo de anterior a
posterior, siendo los dos últimos muy poco
marcados. Callo parieto columelar muy leve-
mente señalado. El labrum es delgado en su
borde libre y algo elevado hacia el hombro de
la vuelta. Interior de la abertura con cinco liras
débiles en el labio palatal, dispuestas aproxi-
madamente a la altura del nivel medio de los
pliegues columelares. Color uniforme, blan-
Figura 4 Gibberula bribri (escala =1mm) 4U€cino/ transparente.
100
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
El animal (Lam. 1) tiene la cabeza hialina, con numerosas manchas naranja y blanco
nieve. Tentáculos hialinos con manchas naranja. Pie blanco nieve con bandas hialinas la-
terales y posterior llenas de manchitas naranja y alguna manchita negra cerca del borde.
Angulos del pie de color blanco nieve con manchas naranja. El animal en el interior de la
concha es de un llamativo color verde brillante con numerosas manchitas circulares naranja,
orladas o no de negro y de tamaño muy similar (hasta 15 o más se pueden contar en una
línea imaginaria transversal en un animal de 1, 2 mm). Un conspícuo circulo azul violá-
ceo, rodeado de manchas naranja, destaca en la región dorsal izquierda y hasta tres se
pueden apreciar ventralmente; el borde anterior del fondo verde está delimitado por
manchas naranja festoneadas de negro; por delante la “nuca"es de color blanco con man-
chas naranja. Interior de la espira verde con manchas naranja. Los ejemplares mayores tie-
nen mayor cantidad de manchitas negras en las bandas hialinas del pie.
Etimología: Nombrada en honor de la cultura aborigen Bribri, que habita en la zona
del Parque Nacional Cagúitas-Gandoca, del Mar Caribe de Costa Rica.
Discusión: La descripción de Gibberula bribri, especie nueva, está basada en un lote
de 17 ejemplares que presentaron una relativa constancia en todos su caracteres anató-
micos distintivos: forma, tamaño, número de pliegues columelares y patrón de colora-
ción del animal vivo. Es la especie más pequeña del género que se conoce hasta el presente
en el área antillana y por su pequeño tamaño pudiera ser comparada con Gibberula minima
(“Guilding” Sowerby, 1847) de St. Vincents, Antillas Menores, la cual es de tamaño
algo mayor (2-25 mm), tiene sólo tres pliegues columelares y la forma de la concha es di-
ferente.
Gibberula marioi especie nueva
(Lámina 1, Figura 5)
Material examinado: Un ejemplar recolectado vivo (04/2000) en los arrecifes coralinos de
Manzanillo, Mar Caribe de Costa Rica (localidad tipo), a 30 m de profundidad. Holotipo: Rádula de
un ejemplar de 2 mm de largo y 1, 4 mm de ancho (Fig. 5), depositado en el INBio de Costa Rica.
Descripción: Concha lisa y pulida (Fig. 5A), de forma triangular y ancha (0, 7 relación
ancho/largo). Presenta sólo cuatro pliegues columelares y a la altura de éstos hay cinco den-
tículos pequeños en el borde interno del labio palatal y seis liras espaciadas por el interior
de la abertura. La concha es de color blanco, algo translúcido y uniforme.
El animal (Lam. 1), tiene la cabeza blanca, con una mancha naranja a cada lado del
morro y otra detrás de cada ojo. Pie blanco, con manchas amarillas: 5-6 laterales peque-
ñas, dos anteriores grandes, entre las cuales hay dos manchas naranja, y dos posteriores
triangulares, muy grandes, casi tan largas como la región posterior del pie. Animal den-
tro de la concha de color blanco, con numerosas manchitas de color naranja o amarillo de
tamaño similar y dos llamativas manchas rojizas, mucho mayores, situadas en posición
dorso lateral izquierda. Interior de la espira rosado.
La rádula (Fig. 5B) se dispone en una doble voluta con la zona de formación de placas
101
Espinosa y Ortea
Figura 5. Gibberula marioi especie nueva: A, concha (Holotipo). B, vista dorsal y ventral de una
placa radular (escala= 10 um). C, saco radular (g= glándula salivar, r= rádula, v= varilla).
Figure 5. Gibberula marioi new species: A, shell (Holotipe). B, dorsal and ventral view of radu-
lar plate (scale bar= 10 um). C, radular sac (g= salivary gland, r= radular ribbon).
muy abierta. Presenta 144 placas de unas 17 um de ancho, provistas de 4 cúspides a cada
lado de la central siendo la tercera de menor tamaño que el resto, todas muy similares. A
veces aparece una cúspide secundaria en la central. Dos glándulas similares a racimos
de uvas estirados, sostenidas por dos varillas esqueléticas, se disponen flanqueando a la rá-
dula; son casi tan largas como la cinta radular y están formadas por células vacuolares
gigantescas y nucleadas .
Etimología: Nombrada, en honor de Mario Calderon, parataxónomo del Laboratorio
de Malacología del INBio, por su aporte al inventario de los Moluscos Marinos del Par-
que Nacional Cagúitas-Gandoca.
102
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
Genero Granulina Jousseaume, 1888
Granulina minae especie nueva
(Lámina 1. Figura 6)
Material examinado: Dos ejemplares recolectados vivos (10/2000) en Punta Mona (localidad
tipo), Manzanillo, Limón, Caribe de Costa Rica, entre 12 y 15 m de profundidad. Holotipo: (16 mm
de largo y 115 mm de ancho. Figura 6) depositado en el INBio, Costa Rica. El segundo ejemplar
de dimensiones similares se extravió durante el estudio del material.
Descripción: Concha de tamaño muy pequeño, ovuliforme, con la espira parcial-
mente cubierta por el callo postlabral. Columela con cuatro pliegues, el segundo anterior
más marcado que los otros tres; el cuarto posterior es muy débil y practicamente sólo vi-
sible en el interior de la columela. El labrum es relativamente ancho y engrosado, con
numerosos dentículos pequeños y algo irregulares en el interior de su borde libre (hasta la
altura del segundo pliegue se pueden contar 4 y por encima de ellos otros 9); abertura
larga y de ancho casi uniforme, algo más estrecha que el labrum. Color blanquecino, se-
mitranslúcido.
El animal vivo (Lam. 1) tiene el sifón de
color amarillo limón. Tentáculos orales hia-
linos con dos anillos blanco nieve en el ani-
mal de menor talla y amarillos en el mayor.
Pie hialino, con numerosas manchas redon-
deadas blanco nieve y algunas amarillas y
naranja. El manto llega a recubrir por com-
pleto a la concha; su coloración de fondo es
negra y sobre ella destacan manchas amarillas
y naranja, más notorias sobre los tubérculos.
En la región posterior hay un tubérculo
blanco nieve. La coloración del animal den-
tro de la concha presenta estrías longitudi-
nales anteriores de color amarillo y puntos
amarillos y naranja por todo el dorso. En
posición transversal posterior se observa
una mancha blanca, en forma de riñon.
Figura 6. Granulina minae (escala= 1 mm)
Etimología: Granulina minae, en reconocimiento al apoyo prestado por el Ministerio
del Ambiente y Energía de Costa Rica (MINAE) a nuestras campañas de inventario de Mo-
luscos en el mar Caribe de Costa Rica.
Discusión: Por su tamaño y proporción ancho/largo, Granulina minae, especie
nueva, puede ser comparada con Granulina antillensis (Jong y Coomans, 1988), descrita
de Curacao, la cual es de forma más estrecha y aguzada en su extremo posterior, con la es-
pira excavada al final del callo postlabral y tiene más marcados los pliegues columelares.
103
Espinosa y Ortea
Cystiscus genecoani
E |
il 4 ; | zÑ Ñ en
IN ¿ X /
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Gibberula ubitaensis e Gibberula sierrai
| WÁD Gibberula marioi
Gibberula bribri |
o,
LÁMINA1 (escala 1 mm)
104
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
Género Furcilla Espinosa y Ortea género nuevo
Especie tipo: Furcilla tica
Diagnosis del género: Concha ovulivorme, con la espira cubierta por la última
vuelta, con un sólo pliegue columelar visible. Animal sin trompa ni sifón y con dos grue-
sos tentáculos orales dispuestos en horquilla. Rádula formada por placas con cúsipes del
mismo grosor y forma, separadas regularmente.
Etimología: Del latin furcilla = horquilla, por la disposición de los tentáculos de la ca-
beza. Género femenino.
Discusión: Las características de la concha, la rádula y la anatomía externa e interna
del animal de Furcilla, género nuevo, no tienen relación con ninguno de los géneros
margineliformes conocidos hasta el presente (vease COOVERT Y COOVERT, 1995). Por su
estructura radular, semejante al Tipo 3 de COOVERT Y COOVERT (1995) se puede situar
tentatoriamente dentro de la subfamilia Persiculinae, de la familia Cysticidae.
Furcilla tica especie nueva
(Lámina 2. Fígura 7)
Material examinado: Un ejemplar recolectado vivo (04/2000) en los arrecifes coralinos de
Manzanillo, Mar Caribe de Costa Rica (localidad tipo), a 30 m de profundidad. Holotipo: Radula de
un ejemplar cuya concha midió 1, 25 mm de largo y 0, 87 mm de ancho, depositado en el INBio de
Costa Rica.
Descripción: Concha lisa y pulida (Fig. 7A), ovuliforme globosa, con la espira com-
pletamente cubierta por la última vuelta y de tamaño muy pequeño. Columela con un
solo pliegue marcado visible externamente; en el interior de la pared columelar hay ade-
más otro pliegue mucho menos desarrollado que el primero y entre ambos un pliegue
muy débil o lira columelar (Fig. 7B). Solamente los pliegues primario y secundario se
continúan internamente por las vueltas de la espira. Labrum muy delgado, extendido
desde el canal anterior hasta el extremo apical. La abertura es relativamente estrecha y de
ancho casi uniforme en toda su extensión. Color completamente blanco hialino.
El animal (Lam. 2) presenta una llamativa cabeza de color rojo, con dos gruesos ten-
táculos com hinchazones dispuestos formando una horquilla (tirachinas). Los ojos son
de color rojo y muy aparentes en vista ventral, donde la cabeza es naranja. El pie pre-
senta dos lóbulos muy marcados en su borde anterior y una llamativa línea media de co-
lor rojo sobre la cola. El manto es también de un bello color rojo y recubre ligeramente a
la concha en sus bordes anterior y posterior. El animal dentro de la concha es de tonalidad
rosada apreciandose una U de color rojizo que corresponde al saco radular.
En el Holotipo (1225 mm x 087 mm) la rádula (Fig. 7B) está formada por 277 pla-
cas, la mayor descrita hasta el momento en un animal de las familias Marginellidae y
Cystiscidae. Las placas miden 10 um de ancho y presentan 6 cúspides gruesas de igual ta-
maño, separadas unas de otras por espacios iguales. En los últimos dientes las cúspides mas
externas son algo más reducidas.
105
Espinosa y Ortea
A se
Figura 7. Furcilla tica género y especie nueva. A, concha (escala=1 mm). B, pliegues columela-
res (escala=100 um). C, placas radulares n* 30 y n* 250 (escala=10 um). D, digestivo anterior: gl,
glándula de Leiblein (?), se= saco esofágico, sr= saco radular.
Figure 7. Furcilla tica género y especie nueva. A, shell (scale=1 mm). B, pliegues columellar
plications (escala=100 um). C, radular plates n” 30 and n* 250 (scale=10 um). D, JESUS gl,
Leiblein gland (?),se= saco esofágico, sr= saco radular.
El saco radular (fig. 7C) es un saco alargado, coloreado de castaño rojizo que da la
vuelta por el dorso del animal, de izquierda a derecha. Hay una glándula (Leiblein ?) sin
conducto excretor diferenciado en el inicio de la porción esofágica. El saco esofágico es
un saco plegado sobre si mismo.
Etimología: tica, diminutivo de caracter femenino con el que se conoce lo que es
oriundo de Costa Rica.
Discusión: Por el aspecto externo del animal, la concha y la:rádula, Furcilla tica, es-
pecie nueva, no tiene relación con ninguna especie margineliforme conocida hasta el
106
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
momento. El hallazgo de esta diminuta y particular especie ocasionó un aumento del es-
fuerzo de muestreo para recolectar más ejemplares, pero su tamaño extremadamente pe-
queño y la complejidad de su microhabitat, grietas y oquedades poco iluminadas situadas
en parches de arrecifes coralinos a 30 m de profundidad, han hecho fracasar hasta el pre-
sente nuestros intentos.
Familia MARGINELLIDAE Fleming, 1828
Género Prunum Hermassen, 1852
Prunum chumi especie nueva
(Figuras 8 y 9)
Material examinado: Cinco conchas y dos ejemplares recolectados vivos en los arrecifes co-
ralinos de Manzanillo (localidad tipo), Limón, Mar Caribe de Costa Rica entre 10 y 15 m de pro-
fundidad. Holotipo: (188 mm de largo y 10% 25 mm de ancho. Figura 8) depositado en el INBio,
Costa Rica. Paratipos: (165 mm de largo y 88 mm de ancho) depositado n el IDO, La Habana, Cuba;
(151 mm de largo y 83 mm de ancho) depositado en el Museo de Ciencias Naturales de Tenerife,
islas Canarias; (151 mm de largo y 825 mm de ancho) depositado en el INBio, Costa Rica.
Descripción: Concha lisa y brillante, de
2 tamaño mediano a grande comparada con
% otras especies antillanas del género, de forma
suboval con sus lados moderadamente convexos
en sus partes medias y más acentuado hacia
ñ' sus extremos. La espira es muy corta pero sa-
i_ liente, formada por unas dos vueltas y media, la
primera de las cuales, grande y redondeada es
de protoconcha; la tercera y última vuelta
ocupa aproximadamente el 89% del largo to-
tal de la concha. La abertura es muy estrecha
en su porción posterior y ligeramene más en-
sanchada en la anterior; el labrum es relativa-
mente estrecho y poco engrosado, sin dentícu-
los internos; el callo postlabral recubre la es-
pira hasta casi el final de la protoconcha. Co-
lumela casi desprovista de
callosidades, y con cuatro
pliegues desiguales, siendo
los dos centrales los mayo-
res. Color de fondo cas-
taño, con tres franjas oscu-
ras de tono pardo anaran-
jado sobre la última vuelta.
Las franjas anterior y la
Figura 9. Prunum chumi, placa radular (escala = 100 um).
107
Espinosa y Ortea
central producen sobre el labrum dos manchas pardo naranja muy notables y la más pos-
terior sólo un leve ensombrecimiento al final dorsal de éste. También hay zonas ensom-
brecidas del mismo color en la porción dorsal del comienzo del canal anterior y en el ca-
llo postlabral. Sobre la última vuelta se observan algunas manchitas blancas, pequeñas e
irregularmente distribuidas. La protoconcha es de color pardo, algo aporcelanado; el labrum,
los pliegues columelares y el extremo anterior de la columela son blancos.
El animal (Fig. 8) es de color rosa, algo translúcido, con numerosas manchas blancas
por todo el cuerpo, incluyendo los tentáculos y el sifón.
En los animales fijados la coloración del manto sobre las visceras es negra. El pie
tiene los laterales rosados y los tentáculos cefálicos círculos rojos sobre fondo rosa.
Lo más característico de este animal es que presenta dos hojas branquiales, una mayor
que otra y las dos ramas del osfradio son asimétricas, asociadas una a cada branquia.
La rádula de uno de los paratipos (15 mm de largo por 8,7 mm de ancho) (Fig. 9), pre-
sentó 40 placas. Todas las placas son muy iguales y regulares en forma y estructura. Mi-
den 400 um de ancho y presentan 29-31 cúspides de sólo dos tamaños, ocho mayores o pri-
marías y 21-22 menores o secundarias. Las primarias son de dos a tres veces más altas que
las secundarias. El punto medio de cada placa coincide con la cuarta cúspide primaria 1z-
quierda (quinta derecha).
Etimología: Nombrada en honor de Alcides Berrocal “Chumi”, parataxónomo del
Laboratorio de Malacología de INBio, por su valioso aporte al inventario de los Molus-
cos Marinos del Mar Caribe de Costa Rica.
Discusión: Por la forma y patrón de la concha Prunum chumi, especie nueva, se en-
cuentra relacionada con Prunum guttatum (Dillwyn, 1817), de la cual difiere por ser en ge-
neral de menor tamaño, tener menos desarrollo en sus áreas callosas y por ser de color de
fondo más oscuro, con muy escasas manchitas blancas sobre la última vuelta, irregularmente
dispuestas. Según la figura dada por ABBOT Y DANCE (1982) de un ejemplar vivo de P. gut-
tatum, la coloración del animal de esta última especie es también diferente de la de P.
chumi, especie nueva. Prunum cubanum Sarasúa y Espinosa, 1978, especie descrita de la
costa Norte de Cuba y relacionada también con P. guttatum, es de menor tamaño, no
tiene la espira señalada y su coloración es mucho más clara, amarillo pajizo con numerosas
manchitas blanquecinas.
La rádula atribuida a P. gutatum de la Isla Guanaja (Honduras) por COOVERT Y Coo-
VERT (1990), se corresponde con la de Prunum chumi, especie nueva.
Género Volvarina Hinds, 1844
Volvarina yolandae especie nueva
(Lámina 2. Figura 10)
Material examinado: Cuatro ejemplares recolectados vivos en Manzanillo y dos en Punta
Uvitas, Limón, Mar Caribe de Costa Rica, entre 10 y 25 m de profundidad. Holotipo: (64 mm de
108
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
largo y 25 mm de ancho) procedente de Manzanillo (localidad tipo), depositado en el INBio,
Costa Rica. Paratipos: (59 mm de largo y 2'4 mm de ancho) depositado en el IDO, La Habana, Cuba;
(55 mm de largo y 23 mm de ancho) depositado en el Museo de Ciencias Naturales de Tenerife,
islas Canarias. Todos procedentes de la localidad tipo. Uno de los ejemplares examinados fue un ju-
venil recien eclosionado de 22 mm de largo (Fig. 10A y B).
Descripción: Concha lisa y brillante, de tamaño pequeño comparada con otras espe-
cies antillanas del género, fusiforme alargada, con el labio izquierdo convexo y el derecho
ligeramente sinuado (convexo en sus extremos y algo excavado en el centro). La espira es
corta pero bien señalada, formada por dos vueltas, la primera de las cuales, grande, glo-
bosa y saliente es de protoconcha; la cuarta y última vuelta ocupa aproximadamente el 86%
del largo total de la concha. La abertura es casi tan larga como la última vuelta, estrecha
en su porción posterior y marcadamente más ensanchada en la anterior; el labrum es es-
trecho y muy poco engrosado, insertado en la espira al nivel de la sutura de la vuelta pre-
cedente. Columela con cuatro pliegues señalados, desiguales en desarrollo, los dos centrales
mayores que los otros dos, sobre todo del cuarto que es el menos marcado de todos. Co-
lor de fondo rosa pardo con cinco bandas oscuras de color pardo naranja distribuidas so-
bre la última vuelta; la protoconcha, los pliegues columelares y el extremo libre del labrum
son algo más claros que el resto de la concha.
Figura 10. Volvarina yolandae: A-B, juvenil (escala=1 mm) y placa radular (escala=50 um). C-
D, concha del adulto (escala=1 mm) y placa radular (escala=50 um). E, animal en alcohol.
Figure 10. Volvarina yolandae: A-B, young (scale=1 mm) and radular plate (scale=50um). C-D,
adult shell (scale=1 mm) and radular plate (scale=50 um). E, preservate specimen.
109
Espinosa y Ortea
El animal es de color blanco con manchas rojas en la parte anterior del pie, los tentá-
culos y el sifón, éste último también las tiene blanco nieve. En general el pie presenta de
una a cuatro mancha rojas en cada ángulo anterior y lo mismo sucede en los tentáculos ora-
les. La trompa tiene en los ejemplares mayores (más de 55 mm) manchas blancas, rojas
y granate superficiales que destacan sobre otras amarillas, más profundas. Por transparencia,
a traves de la concha se aprecian manchas irregulares de color negruzco que se mantienen
en los animales conservados en alcohol. Los juveniles (22 mm) solo presentan algunas
manchitas rojas y blancas en el sifón (Fig. 10A).
La rádula del animal de 2,2 mm presentó 39 placas de 45-50 um de anchura. En cada
placa se contabilizaron 16 cúspides, dos de ellas, casi el doble de altas que las restantes.
La tercera cúspide secundaria externa está en algunas placas más desarrollada, lo mismo
que la cúspide central de la zona media. En un animal de 5,4 mm de concha la rádula
presentó 44 placas de unas 100 um de ancho y 21 cúspides. Las placas se caracterizan
por ser perfectamente simétricas, con una cúspide central o primara (P) más desarrollada
que el resto, dos secundarias (s) y 18 terciarias (t). La fórmula sería: 4t-s-5t-P-St-s-4t.
La branquia es mas larga que el osfradio y el órgano de Leiblein es de forma foliacea,
con el conducto secretor surgiendo ventralmente del centro del limbo de la hoja.
Etimologia: Nombrada en honor de nuestra colega y amiga Yolanda Camacho. Con-
servadora de Moluscos del INBio, como reconocimiento a su contribución al inventario
de los moluscos marinos del Caribe de Costa Rica.
Discusion: Por su tamaño y forma, Volvarina yolandae, especie nueva, puede ser
comparada con Volvarina gracilis (C. B. Adams, 1851), Volvarina noeli, Volvarina
juanjoi, Volvarina betyae y Volvarina dulcemariae, todas descritas por ESPINOSA Y ORTEA
(1998) y con Volvarina banesensis y Volvarina floresensis propuestas en ESPINOSA Y
ORTEA (1999), de las que se diferencia fundamentalmente por el patrón de color de su
concha (cinco bandas pardo naranja), la presencia de manchitas rojas en la parte anterior
del animal y por la forma y tamaño de sus placas radulares. Volvarina isabelae (Borro,
1946), descrita de la zona occidental de la costa norte de Cuba, aunque tiene un patrón de
color formado por cinco o seis bandas espirales de color pardo rojizo, es de tamaño me-
nor (43 mm de largo) y la forma de la concha y los pliegues columelares la diferencian
facilmente de Volvarina yolandae.
Género Dentimargo Cossmann, 1899
Dentimargo cruzmoralai especie nueva
(Lámina 2. Figura 11)
Material examinado: Dos ejemplares recolectados vivos (04/2000) en los arrecifes coralinos
de Manzanillo (localidad tipo), Mar Caribe de Costa Rica, entre 12 y 15 m de profundidad. Holo-
tipo: (3 mm de largo y 165 mm de ancho. Fig. 11A) depositado en el INBio de Costa Rica.
110
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
Descripción: Concha lisa y pulida (Fig. 11A), de forma bicónica y tamaño pequeño com-
parada con otras especies antillanas del género. La espira es extendida, con unas dos y un
cuarto a dos y media vueltas, de las cuales la primera, grande y redondeada, es de proto-
concha. Columela con cuatro pliegues muy marcados. El labrum es relativamente estre-
cho y poco engrosado; en el interior del labio palatal hay un dentículo pequeño, aguzado
y saliente, situado hacia el tercio posterior de la abertura. Color uniforme, blanco leche.
El animal dentro de la concha (Lámina 2) es de color blanco con puntos rojizos, dos de
ellos más grandes se disponen en la primera y segunda vuelta de espira; hasta cuatro
vueltas y media de espira dentro de la concha. Hay un anillo naranja alrededor del ojo. Pie
hialino con un dibujo en forma de cruz de color blanco nieve (Fig. 11B).
El osfradio y la branquia terminan a la misma altura sobre la penúltima vuelta, ocupando
casi una vuelta completa de espira. Ambas estructuras tienen una anchura más o menos
igual, siendo algo más ancha la branquia y presentando un estrechamiento el osfradio en
su zona media. El órgano de Leiblein es una estructura grande y compleja (Fig. 11C), si-
tuada debajo del osfradio y entre él y la zona de la sutura de la primera vuelta. Tiene la
forma de saco aplastado dorsoventralmente del que sale un conducto por su zona media
que se pliega dos veces hacia arriba y que presenta una segunda zona de secreción despues
de salir de la estructura principal. Un conducto largo y apelotonado llega hasta el collar ner-
viOSO esofágico.
Etimología: Nombrada en honor de D. Cruz Morala, ejecutivo de ventas de Iberia
en Asturias y como reconocimiento por su ayuda en nuestros desplazamientos aéreos.
Figura 11. Dentimargo cruzmoralai, especie nueva. A, concha (escala=1 mm). B, glándula de
Leiblein: cl, conducto de Leiblein; e, esófago; cn, collar nervioso. C, suela del pie.
Figure 11. Dentimargo cruzmoralai, especie nueva. A, shell (scale=1 mm). B, Leiblein gland: cl,
Leiblein duct; e, voesophagus; cn, nerve ring. C, pedal sole.
111
Espinosa y Ortea
Dentimargo cruzmoralai Dentimargo zaidettae
Dentimargo sp.
/ Furcilla tica
Y Volvarina yolandae
LÁMINA 2 (escala 1 mm)
112
Nuevas especies de moluscos de Costa Rica
Discusión: Por su tamaño pequeño, el escaso desarrollo de los dentículos palatales, el
patrón de coloración del animal, asi como su anatomía interna, Dentimargo cruzmora-
lai, especie nueva, no tiene relación con ninguna otra especie conocida del género que
permita su comparación. Al igual que señalamos en el caso de Hyalina Schumacher,
1817 (EsPINOSA Y ORTEA, 1999b) que también carece de rádula, la anatomía externa e
interna de los animales, además de la concha, conforman un conjunto de caracteres que per-
mite separar las especies de dentimargos. De las especies del género anteriormente des-
critas practicamente solo existe información sobre sus conchas, lo cual reduce la pre-
sente discusión a este único aspecto.
Dentimargo zaidettae especie nueva
(Lámina 2. Figura 12)
Material examinado: Dos ejemplares recolectados vivos (10/2000) en Punta Mona (localidad
tipo), Manzanillo, Mar Caribe de Costa Rica, entre 12 y 15 m de profundidad. Holotipo: (285 mm
de largo y 165 mm de ancho) depositado en el INBio, Costa Rica. Paratipo: (275 mm de largo y
155 mm de ancho) depositado en el IDO.
Descripción: Concha lisa y pulida (Fig. 12), de forma bicónica y tamaño pequeño
comparada con otras especies antillanas del género. La espira es extendida, con dos vuel-
tas, de las cuales la primera, muy grande y am-
pliamente redondeada es de protoconcha. Colu-
mela con cuatro pliegues muy marcados. El la-
brum es relativamente estrecho y poco engro-
sado; en el interior del labio palatal hay un den-
tículo pequeño y poco notable, situado hacia el
tercio posterior de la abertura, por debajo del
cual se esboza otro mucho más débil y apenas
perceptible. Color uniforme, blanco translúcido.
El animal tiene el sifón cristalino, con la re-
gión distal blanco niveo. Tentáculos cristalinos.
Ojos con una mancha naranja infraocular. Pie
cristalino, con dos pequeñas manchas blanco
nieve en los ángulos anteriores, otra, de mayor
tamaño en el lateral y una mancha alargada,
muy irregular y de igual color, sobre la cola. El
animal dentro de la concha es pardo con una
banda circular rosada en el tercio de la última
vuelta próximo a la espira.
Etimología: Nombrada en honor de Zaidet
Barrientos, Conservadora de Moluscos en el La-
boratorio de Malacología del INBio, como reco-
nocimiento a su aporte al inventario de la mala-
cofauna de Costa Rica.
Figura 12. Dentimargo zaidettaee
escala = 1 mm
3
Espinosa y Ortea
Discusión: Por su tamaño y el aspecto general de la concha, Dentimargo zaidettae, es-
pecie nueva, puede ser comparado con Dentimargo cruzmoralai (descrito en este artí-
culo), del cual se diferencia por ser de protoconcha mayor, tener las vueltas ligeramente
más anchas y convexas y por tener los animales distinto patrón de coloración.
Dentimargo sp.
(Lámina 2)
Material examinado: Punta Mona, Manzanillo, Costa Rica, 14 de Octubre de 2000, dos ejem-
plares de unos 2 mm recolectados a 9 m de profundidad.
Descripción del animal vivo: Trompa hialina con su porción distal amarilla. Tentá-
culos hialinos con el ápice blanco nieve. Pie con manchas amarillas: las anteriores sepa-
radas o fusionadas, al igual que las laterales y posterior. Animal dentro de la concha de co-
lor blanco con manchas rojizas dispersas (Lam. 2). Los ojos tienen la mancha naranja su-
praocular, no lo rodea por completo. Las conchas son aparentemente inmaduras.
Discusión: Aunque la coloración del animal sugiere que pudiera tratarse de una tercera
especie de Dentimargo del área, no descrita, hemos optado por aplazar su descripción
hasta disponer de material adicional y comprobar si la aparente inmadurez de la concha es
propia de ejemplares jóvenes o una característica más de la especie.
AGRADECIMIENTOS
Nuestro más sincero agradecimiento a Yolanda Camacho, Leopoldo Moro, Manuel Ca-
baller y al grupo de parataxónomos del INBio, por su participación en las campañas de re-
colección y el aporte de material. Los resultados obtenidos en este trabajo forman parte del
programa de Inventario de los Moluscos Marinos del Caribe de Costa Rica, financiado por
el Gobierno de los Paises Bajos y realizado con el apoyo del MINAE de Costa Rica.
BIBLIOGRAFIA
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114
Avicennia, 2000, 12/13: 115-126
Nuevos registros de Neréididos (Polychaeta: Nereididae) para
las Islas de Cabo Verde y Canarias
New records of Nereidids (Polychaeta: Nereididae) from Cape
Verde Islands and Canary Islands
Jorge Núñez, Rodrigo Riera y María del Carmen Brito
Departamento de Biología Animal (Zoología), Facultad de Biología, Universidad de La La-
guna, 38206 La Laguna, Tenerife, Islas Canarias, España.
Resumen
Se estudia una colección de Neréididos de las Islas de Cabo Verde (1996-97) y Canarias
(1999). De las 6 especies registradas, destacan Perinereis amblyodonta (Schmarda) por ser pri-
mera cita para el Atlántico e Islas de Cabo Verde, y Nereis rava Ehlers que es el primer registro
para las Islas Canarias, ampliándose su límite meridional. Además, se discute la validez de Ne-
reis funchalensis (Langerhans) especie afín a N. jacksoni (Kinberg).
Abstract
A collection of Nereidids is studied collected in the Cape Verde Islands (1996-97) and Ca-
nary Islands (1999). Six species were recorded, of which Perinereis amblyodonta (Sch-
marda) is recorded for the first time in the Atlantic and Cape Verde Islands, and Nereis rava
Ehlers is first record for the Canary Islands , being its southern limit enlarged. Also, is discussed
the validity of Nereis funchalensis (Langerhans), related species to N. jacksoni (Kinberg).
Palabras clave: Polychaeta, Nereididae, Cabo Verde, Islas Canarias, Región Macaronésica.
Keywords: Polychaeta, Nereididae, Cape Verde, Canary Islands, Macaronesian Region.
INTRODUCCION
Las principales contribuciones sobre la fauna de poliquetos de Cabo Verde se deben
a las campañas de recolección efectuadas por los barcos H.M.S. "Challenger" (McIN-
TOSH, 1885), "Hirondelle y Princesse-Alice” (FAauveL, 1914, 1916) y "Calypso" (Ru-
LLIER, 1964). Los resultados faunísticos de esta última expedición oceanográfica (Ru-
LLIER, OP. cit.) constituyen el estudio más amplio sobre los poliquetos de las Islas de
Cabo Verde, en esta monografla se citan 142 especies, de las cuales 10 son Neréididos.
Otras contribuciones publicadas más recientemente, son las de KIRKEGAARD (1983), Lo-
PEZ Y SAN MARTIN (1992) y NUÑEZ ET AL. (2000), que catalogan en este último trabajo 213
especies, de las cuales 14 pertenecen a la familia Nereididae.
En el ámbito de las Islas Canarias los estudios sobre la familia Nereididae han sido más
numerosos (NUÑEZ ET Al., 1981, 1984; NuÑez, 1993, 1995), siendo superior el número de
especies citadas respecto a otros archipiélagos macaronésicos. Hasta el momento hay 19
especies citadas para Canarias, que suponen aproximadamente el 50% de las especies
que se conocen para la Península Ibérica y los archipiélagos mediterráneos del entorno (Is-
las Baleares y Chafarinas), en donde se han citado 36 especies (NUÑEZ /N LITT.).
115
Núñez, Riera y Brito
MATERIAL Y METODOS
El material estudiado procede de las campañas efectuadas en 1996 y 1997 en el marco del pro-
yecto “Evaluación de los recursos naturales litorales de las Islas de Cabo Verde”, y la campaña re-
alizada en las islas de Boavista y Sal en 1999, dentro del proyecto "Macaronesia 2000”. El material
procedente de Canarias se colectó durante la realización de prácticas de Biología Marina del curso
1999-2000, en el barco oceanográfico Taltarte.
La mayor parte del material procedente de Cabo Verde se colectó a mano en la zona mesolito-
ral y en el submareal somero hasta 4 m de profundidad, utilizando equipos ligeros de buceo. Las mues-
tras mesolitorales se realizaron en charcos de marea y en zonas con agregados de tubos de Sabelá-
ridos, las submareales provienen del volteo de piedras y de fondos arenosos donde se utilizó un
aspirador. Los dragados de arrastre provenientes de Tenerife se efectuaron en Los Cristianos a 400
m de profundidad, extrayéndose los ejemplares de una colonia del hexacoralario Dendrophyllia
cornigera.
El material se fijó con formaldehido al 10% en agua de mar y, posteriormente, se conservó en
alcohol etílico al 70%. La iconografía se realizó a partir de disecciones de podios en preparaciones
microscópicas semi-permanentes de gel de glicerina y los dibujos se confeccionaron con la ayuda
de un tubo de dibujo, adaptado a un microscopio óptico Leica DLMB con contraste de Nomarski.
El material estudiado se encuentra depositado en la colección del Departamento de Biología
Animal (Zoología) de la Universidad de La Laguna (DZUL ).
SISTEMATICA
FAMILIA Nereididae Johnston, 1865
Websterinereis glauca (Claparede, 1870)
Nereis (Leptonereis) glauca Claparede, 1870: 454, Lam.7, fig 3.
Material examinado. Islas de Cabo Verde: Sal, Embarcadero de Santa María, 12-4-1999, col.
J. Núñez, asociado a tubos de Sabeláridos, Hidroideos y Caulerpa, a 1m de profundidad, 2 ejemplares.
Hábitats. Vive preferentemente en fondos de sustratos duros, en las comunidades de
algas fotófilas y esciáfilas. Es también frecuente en facies de gorgoniáceos, escleractíni-
dos y en concreciones calcáreas. Su rango batimétrico es amplio, habitando desde los ni-
veles inferiores del mesolitoral hasta fondos batiales (BELLAN, 1964). Menos frecuente en
sustratos blandos y praderas de fanerógamas. Soporta los medios parálicos y tolera los
ambientes contaminados (CAPACCIONI, 1988). (TENA, 1996) la define como componente
de la criptofauna móvil de microambientes esciáfilos, especialmente de fondos duros
desde el mesolitoral al circalitoral.
Distribución. Atlántico-mediterránea, desde las costas de Dinamarca hasta Angola. Me-
diterráneo, Mar Negro.
116
Nuevos registros de Neréididos
Nereis funchalensis (Langerhans, 1880)
Nereis funchalensis.- NUÑEZ, BACALLADO Y BRITO, 1981: 167, fig. 5; NUuÑ£z, 1995: 75, fig.]
Lycoris (Neanthes) funchalensis Langerhans, 1880: 287, Lám. 15, fig. 23 a-n.
Nereis moroccensis Amoureux, 1976: 344, figs. 5-9.
Material examinado. Islas de Cabo Verde: Boavista, Ervatao, 10-4-1999, col. J. Núñez, me-
solitoral superior asociado a tubos de Sabeláridos, 2 ejemplares juveniles.
Discusión. Nereis moroccensis Amoureux, 1976, especie descrita para el Cabo Espartel
en el Estrecho de Gibraltar (Marruecos), es sinónima de Vereis funchalensis Langerhans,
1880 cuya localidad tipo es Madeira. Las descripciones y figuras de ambos autores coin-
ciden claramente, teniendo preferencia N. funchalensis. Hemos revisado ejemplares de
esta especie procedentes de las Islas Chafarinas, Canarias y Cabo Verde, y coinciden con
la descripción original de Langerhans. Una especie afín es N. jacksoni descrita por Kin-
berg (1866) para las costas de Australia y aunque la descripción original es muy sucinta,
posteriores revisiones del material tipo (HUTCHINGS Y TURVEY, 1982 y WiLsonN, 1985)
aportaron características relevantes, que no aparecían en la descripción original. El estu-
dio de ejemplares juveniles y adultos de N. jacksoni muestra variabilidad en la distribu-
ción de los paragnatos y en la aparición y forma de la seda homogonfa notopodial, ob-
servándose en los juveniles una gradación en la forma del artejo hasta llegar a las carac-
terísticas que tiene en los adultos (WILSON, 1985), esta variabilidad se produce también en
N. funchalensis (NUÑEZ, 1995). Probablemente, N. funchalensis y N. jacksoni sean espe-
cies sinónimas porque las descripciones son muy similares y es muy difícil diferenciarlas
a partir de las características morfológicas externas. No existen datos de reproducción de
N. jacksont, pudiendo tratarse de un complejo de especies relacionadas entre si, similar a
lo que se produce en otros Neréididos, que sólo se diferencian por su modo de reproduc-
ción (FONG Y GARTHWAITE, 1994), como en Hediste diversicolor (Miller, 1776), H. lim-
nicola (Johnson, 1901) y H. japonicus (Izuka, 1908).
Hábitats. Frecuente en la banda de algas fotófilas del mesolitoral inferior e infralito-
ral, hasta 25 m de profundidad. En facies del mejillón Perna perna y en concreciones de
algas calcáreas. En comunidades de algas esciáfilas y animales sésiles como poríferos y
corales, formando parte de las poblaciones criptofaunales móviles. Como endobionte de
esponjas se ha encontrado una densidad de 3 ejemplares por cm? en Aplysina aerophoba
(PASCUAL, 1996), siendo menos frecuente en praderas de Posidonia oceanica y Cymo-
docea nodosa.
Distribución. Atlántico oriental tropical y subtropical. Mediterráneo. En el Atlántico
se ha registrado en todos los archipiélagos macaronésicos (Azores, Madeira, Salvajes,
Canarias y Cabo Verde) y en las costas de Senegal. Mediterráneo, desde el estrecho de Gi-
braltar tanto en las costas ibéricas como marroquíes, además de Argelia, Alborán, cuen-
cas occidental y oriental. Mar Negro y Mar Rojo.
117
Núñez, Riera y Brito
118
Nuevos registros de Neréididos
Nereis rava Ehlers, 1868
(Figura 1)
Nereis rava Ehlers, 1868. 517, pl. 21, fig. 10-25.
Material examinado. Islas Canarias: Tenerife, Los Cristianos, 14-7-1998, col. M. Rodríguez,
asociada al hexacoralario Dendrophyllia cornigera, a 400 m de profundidad, 8 ejemplares.
Descripción. El ejemplar de mayor tamaño mide 30 mm de longitud, 1,4 mm de an-
chura en la parte anterior, sin incluir los podios y consta de 60 setígeros. Pigmentación cas-
taño clara en el tercio anterior, que persiste en los ejemplares fijados. Prostomio subpiri-
forme, más largo que ancho, con la parte frontal agudizada (Fig. 1A). Las antenas frontales
se extienden hasta los palpostilos. Dos pares de ojos dispuestos en trapecio. Peristomio li-
geramente más largo que los segmentos siguientes. Cirros tentaculares más o menos rizados,
el par más largo se extiende hasta el setígero 10. Faringe con paragnatos cónicos en el
anillo maxilar y oral, con la siguiente distribución (Fig. 1B,C): anillo maxilar área Í sin pa-
ragnatos, excepcionalmente uno; área II 6-7 paragnatos dispuestos en dos filas oblicuas irre-
gulares; área III 1-6 en grupo transversal; área IV grupo arqueado con 7-8 paragnatos.
Anillo oral área V sin paragnatos, área VI grupo pequeño, en una o dos filas transversa-
les de 3-4; áreas VII y VIII una sóla fila con 3-5 paragnatos. Los dos primeros podios
unirrámeos, siendo birrámeos en el resto del cuerpo. Podios birrámeos de morfología si-
milar en la parte anterior (Fig. 1D), media y posterior del cuerpo, con tendencia a reducirse
el lóbulo notopodial superior, más apreciable en la parte posterior del cuerpo (Fig. 1E). No-
topodio con los dos lóbulos cónicos, siendo algo más largo el inferior, apareciendo entre
ellos una papila setígera de pequeño tamaño. El cirro dorsal sobrepasa un tercio de su
longitud al lóbulo superior en los podios anteriores y medios, en los posteriores lo so-
brepasa en dos tercios. Neuropodio con dos lóbulos setígeros anchos, más cortos que el ló-
bulo inferior notopodial; lóbulo inferior neuropodial estrecho y de longitud similar a los
lóbulos setígeros. Cirro ventral con la inserción más retrasada que el dorsal, se extiende
hasta el extremo del lóbulo inferior. Notosedas homogonfas espinígeras a lo largo de
todo el cuerpo (2-5 por setígero), a partir del setígero 35-45 (carácter variable) se en-
Figura 1 (izquierda). Vereis rava. A, parte anterior, visión dorsal; B, faringe, visión dorsal; C,
faringe, visión ventral; D, podio anterior (setígero 5); E, podio posterior (setígero 47); F, neuro-
seda falciforme heterogonfa, haz superior, podio anterior (setígero 5); G, neuroseda falciforme
heterogonfa, haz inferior del mismo podio; H, neuroseda falciforme heterogonfa, podio medio
(setígero 20); I, neuroseda falciforme heterogonfa, haz superior, podio posterior (setígero 55); J,
notoseda falciforme homogonfa, setígero 47; K, notoseda falciforme homogonfa, setígero 60.
Figure 1 (left). Nereis rava. A, anterior end, dorsal view; B, pharynx, dorsal view; C, pharynx,
ventral view; D, anterior parapodium (setiger 5); E, posterior parapodium (setiger 47); F, hete-
rogomph falcigerous neuroseta, upper bundle, anterior parapodium (setiger 5); G, heterogomph
falcigerous neuroseta, lower bundle, same parapodium; H, heterogomph falcigerous neuroseta,
middle parapodium (setiger 20); I, heterogomph falcigerous neuroseta, upper bundle, posterior
parapodium (setígero 35); J, homogomph falcigerous notoseta, setiger 47; K, homogomph falci-
gerous notoseta, setiger 60.
(barra de escala/scale bar: A = 1,4 mm; B-C = 0,8 mm; D-E = 207 (m; F-K = 20 (m)
1dO
Núñez, Riera y Brito
cuentra | seda homogontfa falcígera, con el artejo alargado (42 um), unidentado, con el ápice
redondeado, ligeramente ganchudo y con espinulación de longitud uniforme en el borde
interno (Fig. 1J,K). Neurosedas supraaciculares homogonfas espinígeras (2-6) y hetero-
gonfas falcígeras (1-3); infraaciculares heterogonfas de ambos tipos, de 2-5 espinígeras y
de 1-3 falcígeras. El artejo de las sedas falcígeras es más largo y estrecho en los podios an-
teriores (50 um) (Fig. 1F,G) que en los medios y posteriores que son m-s cortos (34 um)
y ganchudos (Fig. 1H,!1). Pigidio con dos cirros anales filiformes.
Discusión. Los ejemplares de Canarias coinciden con la descripción original de Nereis
rava, aunque existen algunas características con cierta variabilidad intraespecífica que
pasamos a comentar. El número de paragnatos en las áreas (Il y VI-VIM en los ejempla-
res estudiados es sensiblemente inferior al de las descripciones y material consultado,
pues algunos ejemplares presentan un sólo paragnato en el área III (siendo lo más común
hasta 9) y 3 en la VIL-VIM (frecuentemente presentan 5-10). La distribución de la seda no-
topodial homogonfa falcígera se encuentra más retrasada en los animales de Canarias,
apareciendo entre los setígeros 35-43 y, generalmente, a partir del setígero 25-26.
Hábitats. Especie euribática, existiendo registros hasta 1.685 m de profundidad
(FAUVEL, 1914). Habita sustratos duros y blandos, con un alto grado de ubiquismo como
componente de la criptofauna móvil (TENA, 1996). Tiene preferencia por ambientes poco
iluminados desde el mesolitoral al circalitoral, aunque también ha sido citada en am-
bientes de algas fotófilas. Se encuentra asociada a las comunidades de algas esciáfilas
infralitorales y circalitorales. En praderas de Posidonia oceanica (SAN MARTIN Y VIEI-
TEZ, 1984) y Cymodocea nodosa (SARDA, 1986). Colonizadora de arrecifes artificiales
(BeLLAN Y BELLAN-SANTINI, 1991), en ambientes con algas nitrófilas (CAPACCIONI,
1988) y en ambientes portuarios como componente del fouling.
Distribución. Atlántico-mediterránea, desde el mar del Norte hasta las costas de
Mauritania. En los archipiélagos macaronésicos ha sido citada sólo para Azores (FAU-
VEL, 1914; BELLAN, 1978). Se extiende por todo el Mediterráneo y Mar Negro. Con este
registro se amplía su límite meridional hasta Canarias.
Perinereis cultrifera (Grube, 1840)
Nereis cultrifera Grube, 1840: 74, fig. 6.
Material examinado.- Islas de Cabo Verde: Sal, Embarcadero de Santa María, 12-4-1999,
col. J. Núñez, asociada a tubos de Sabeláridos, Hidroideos y Caulerpa sp, 1 ejemplar.
Hábitats. Especie con tendencia al gregarismo, formando poblaciones numerosas
tanto en sustratos blandos como duros de zonas litorales y parálicas, soportando varia-
ciones de salinidad. Se encuentra desde ambientes supralitorales a infralitorales. En sus-
tratos arenosos, arenoso-fangosos y arenoso-pedregosos, prefiere los sedimentos con
cierto drenaje y las zonas poco expuestas. En ocasiones, se ha encontrado en Canarias
120
Nuevos registros de Neréididos
en hábitats de charcas supralitorales, junto con el oligoqueto Pontodrilus litoralis (Ta-
LAVERA ET AL., 1984). Es frecuente también en algas fotófilas mesolitorales y del infrali-
toral superior. Es una especie poco frecuente en praderas de fanerógamas, ambientes es-
ciáfilos y en fondos profundos.
Distribución. Cosmopolita.
Perinereis amblyodonta (Schmarda, 1861)
(Figuras 2, 3)
Perinereis amblyodonta.- HUTCHINGS, REID Y WILSON, 1993: 247, figs. 3 a-h.
Nereilepas amblyodonta Schmarda, 1861: 106, fig. A-B, K, pl.31, fig. 245.
Perinereis Novae Hollandiae Kinberg, 1866: 175.
Material examinado. Islas de Cabo Verde: Boavista, Ervatao, 10-4-1999, col. J. Núñez, me-
solitoral superior en pequeños charcos con algas cespitosas, endolítico junto con sedimentos arenosos,
2 ejemplares.
Descripción. El ejemplar de mayor tamaño mide 35 mm de longitud, 1,7 mm de an-
chura en la parte anterior, sin contabilizar podios y tiene 93 setígeros. Cuerpo ligera-
mente pigmentado en el prostomio, siendo el resto del cuerpo blanquecino en los ejemplares
fijados. Prostomio subpiriforme, más ancho que largo, con dos pares de ojos dispuestos en
trapecio abierto y un par de antenas cirriformes de pequeño tamaño que no sobrepasan los
palpos (Fig. 2A). Peristomio estrecho, con dos cirros tentaculares cortos, el par de mayor
longitud se extiende hasta el setígero 3-4. Paragnatos en todas las áreas de la probóscide
(Fig. 2B,C), anillo maxilar: área Il, 5-6 en grupo irregular; II, hasta 21 paragnatos dis-
puestos en triángulo y organizados en pequeñas filas decrecientes en tamaño; III, hasta 36
paragnatos dispuestos en un grupo central más o menos ovalado de unos 28 paragnatos y
dos pequeños grupos laterales de 3-5 paragnatos; IV, hasta 46 paragnatos formando un
grupo triangular arqueado, con 4 paragnatos en forma de pequeñas barras lisas dispuestos
en el vértice superior. Anillo oral: área V, 5 paragnatos cónicos más gruesos que el resto,
uno central y un par a cada lado ligeramente retrasados; VI, un solo paragnato en cuchi-
lla transversal; VHI-VII dos o tres filas irregulares de gruesos paragnatos (unos 40).
Mandíbulas cortas, arqueadas y muy esclerotizadas. Los dos primeros pares de podios
son unirrámeos (Fig. 2D), en el resto del cuerpo son birrámeos. La morfología de los po-
dios birrámeos varía a lo largo del cuerpo, sobre todo el lóbulo superior notopodial que se
alarga notablemente en la parte posterior del cuerpo, apreci-ndose a partir del setígero
54-56, haciéndose más patente a partir del 80-82 (Fig. 3C) donde el lóbulo superior no-
topodial se alarga insertándose el cirro dorsal en posición terminal. En la región anterior
y media del cuerpo los podios presentan lóbulos cortos más o menos redondeados (Fig.
3A,B), con el cirro dorsal el doble de largo que el lóbulo superior y el cirro ventral algo
más corto que el lóbulo inferior neuropodial. Las sedas en el primer setígero son todas he-
terogonfas falciformes, 4 en el haz superior y 7 en el haz inferior; en el segundo setígero
aparecen las primeras sedas homogonfas espiniformes sólo en el haz superior y por encima
de las falciformes. En los podios birrámeos la distribución de las sedas es la siguiente: no-
121
Núñez, Riera y Brito
Figura 2. Perinereis amblyodonta. A, parte anterior, visión dorsal; B, faringe, visión dorsal; C,
faringe, visión ventral; D, podio unirrámeo (setígero 1), E, sedas falciformes, haz superior e infe-
rior (setígero 1); F, neurosedas falciformes, haz superior e inferior (setígero 26).
Figure 2. Perinereis amblyodonta. A, anterior end, dorsal view; B, pharynx, dorsal view; C,
pharynx, ventral view; D, uniramous parapodium (setiger 1); E, falcigerous setae, upper and lo-
wer bundle (setiger 1); F, falcigerous neurosetae, upper and lower bundle (setiger 26).
(barra de escala/scale bar: A = 1,6 mm; B-C = 0,7 mm; D = 250 um; E-F = 25 um.
122
Nuevos registros de Neréididos
Figura 3. Perinereis amblyodonta. A, podio birrámeo anterior (setígero 10); B, podio birrámeo,
setígero 56; C, podio posterior, setígero 82; D, notoseda homogonta espiniforme, setígero 26; E,
neuroseda homogonfa espiniforme, setígero 26.
Figure 3. Perinereis amblyodonta. A, birameous anterior parapodiumr (setiger 10); B, birame-
ous parapodium, setiger 56; C, posterior parapodium, setiger 82; D, homogomph spiniger noto-
seta, setiger 26; E, homogomph spiniger neuroseta, setiger 26.
(barra de escala/scale bar: A-C = 250 um; D-E = 18 um.
123
Núñez, Riera y Brito
topodio sólo con 2-4 sedas homogontas espiniformes (Fig. 3D); haz superior neuropo-
dial con sedas homogonfas espiniformes (2-4) (Fig. 3E) y heterogonfas falciformes (2-3)
(Fig. 2E). Las sedas falcígeras tienen una forma similar a lo largo de todo el cuerpo, son
artejo corto, unidentado y romo, haciéndose más puntiagudo a partir del setígero 20 (Fig.
2F). Pigidio con 2 cirros anales.
Discusión. Perinereis amblyodonta forma parte del grupo de especies que se carac-
terizan por el alargamiento del lóbulo notopodial superior, careciendo de sedas hetero-
gonfas espiniformes en el neuropodio. Especies afines son P. marionii (Audouin 4
Milne Edwards, 1832), P. macropus (Claparéde, 1870) y P. anderssoni (Kinberg, 1866).
P. amblyodonta se diferencia claramente de estas especies por la distribución de los pa-
ragnatos. Los dos ejemplares estudiados coinciden con la descripción de HUTCHINGS, ET
AL (1991), la única discrepancia es que nosotros consideramos que los 5 paragnatos que se
distribuyen entre las cuchillas transversales del área VI forman parte del área V. Mientras
que estos autores contabilizaron los paragnatos más externos del área V dentro del área VI.
En el área lll existe variabilidad en el patrón de disposición de los paragnatos, teniendo
desde un sólo grupo central a uno central y dos subgrupos laterales (HUTCHINGS ET al,
1991). Los dos ejemplares estudiados presentan claramente el grupo central y dos latera-
les. Estas pequeñas diferencias son debidas al rango de variabilidad específico y, por
tanto, pensamos que los ejemplares de Cabo Verde deben ser atribuidos a P. amblyo-
donta, ampliándose notablemente el área de distribución de esta especie.
Hábitats. Intermareal, de hábitos creviculares, bajo rocas, endolítica. Es frecuente
entre cirrípedos, piñas de mejillones, entre tubos del serpúlido Galeolaria y en algas
(HUTCHINGS ET AL, 1991). En las anfractuosidades de pequeños charcos del nivel supe-
rior mesolitoral, en plataformas rocosas.
Distribución. Costa sur de Australia, Nueva Zelanda y Filipinas. Atlántico: Islas de
Cabo Verde. Este registro constituye la primera cita de la especie para el Atlántico.
Platynereis dumerilii (Audouin y Milne Edwards, 1833)
Platynereis dumerilii.- FAUVEL, 1914: 193; RuLLIER, 1964: 170; KIRKEGAARD, 1983: 235; Lo-
PEZ Y SAN MARTIN, 1992: 165.
Nereis (Platynereis) dumerilii.- McINTOSH, 1885: 221.
Material examinado. Islas de Cabo Verde: Santiago, Baia de Tarrafal, julio 1997, sobre coral
negro Antiphates sp., 1 ex.; Fogo, San Felipe, 20-7-1997, dragado en fondo con rodolitos a 40 m de
profundidad,1 ex.; Sal, Baia da Mordeira (16 38” 37” N, 22? 57” 87”W), 7-9-1996, dragado en
fondo de cascajo a 18 m de profundidad, 3 ex.; Sal, Embarcadero de Santa Maria, 12-4-1999, col.
J. Núñez, en tubos de Sabeláridos, Hidroideos y Caulerpa, a 1 m de profundidad, 13 ejemplares; Bo-
avista, Praia da Cruz (Sal-Rei), 14-4-1999, col. J. Núñez, bajo piedras a 2 m de profundidad, l ex.
Hábitats. Vive en tubos de paredes finas que se adhieren a diferentes tipos de sus-
trato. Especie ubiquista, eurihalina y euribática, se ha colectado desde la zona mesolito-
124
Nuevos registros de Neréididos
ral hasta 4.850 m de profundidad (HARTMAN, 1965). Su régimen alimenticio parece ser pre-
dominantemente herbívoro. Se trata de una especie muy frecuente en la banda de algas fo-
tófilas de la zona mesolitoral media e inferior, soportando tanto ambientes batidos como
aplacerados. En charcos litorales, facies de mejillón (Mytilus), epibionte del caparazón
de centollos (Maja squinado) y endobionte de esponjas de crecimiento masivo (demos-
ponjas). También es frecuente en las comunidades algales infralitorales, tanto de sustra-
tos rocosos como en praderas de la clorofícea Caulerpa prolifera y en praderas de fane-
rógamas (Posidonia oceanica y Cymodocea nodosa). Habita también sustratos blandos in-
fralitorales con diferentes granulometrías, soportando ambientes con acumulación de re-
siduos urbanos (PARAPAR ET AL., 1996). Importante como componente de las comunida-
des de ambientes portuarios y comunidades epibiontes de cascos de barcos (fouling). Se
trata de una especie indicadora de ambientes eutróficos (TENA, 1996).
Distribución. Cosmopolita.
AGRADECIMIENTOS
A Juan José Bacallado, Director del proyecto Macaronesia 2000, ya que gracias a sus
gestiones ha sido posible realizar las campañas biológicas a las Islas de Cabo Verde. A Ca-
jacanarias, a la Consejería de Política Territorial y Medio Ambiente del Gobierno de Ca-
narias y a la Dirección General de Enseñanza Superior de la Secretaría de Estado de las Uni-
versidades e Investigación del Ministerio de Educación y Cultura, en el marco del proyecto
Fauna Ibérica (PB95-0235), por su apoyo logístico.
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126
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Dos nuevas especies de cicadélidos (Homoptera: Cicadellidae) y
registro del género Neocrassana Linnavuori, 1959, para Cuba
Two new species of leafhoppers (Homoptera: Cicadellidae) and
record of a genus Neocrassana Linnavuort, 1959, from Cuba
Marta M. Hidalgo- Gato
Instituto de Ecología y Sistemática, Apartado postal 8029, La Habana 10800, Cuba.
Resumen
Se describen dos especies nuevas de cicadélidos, Neocrassana alayoi que se caracteriza
por presentar cuatro manchas negras en el borde anterior de la corona y un apéndice en la
parte ventral del pigofer en forma de espina recta y de color negro y Empoasca guajaibona que
presenta la espina dorsal del pigofer dividida en tres ramas. El género Neocrassana Linnavuori,
1959, constituye un nuevo registro para Cuba.
Abstract
Two new species of leafhoppers are described. Neocrassana alayoi is caracterized by
four black spots on the margin crown and side lobes of pygofer with an appendage, and Em-
poasca guajaibona wich presents the anal hook with three branch. Neocrassana Linnavuori,
1959 is a new record from Cuba.
Palabras clave: especies nuevas, Cicadellidae, Neocrassana, Empoasca, Cuba.
Key words: New species, Cicadellidae, Neocrassana, Empoasca, Cuba.
INTRODUCCIÓN
Del género Neocrassana Linnavuori, 1959 sólo se han descrito dos especies en Ve-
nezuela (Linnavuori, 1959), por lo que la recolecta de un ejemplar perteneciente a este gé-
nero en la localidad de Mil Cumbres, Pinar del Río constituye un nuevo registro y nueva
especie para Cuba.
Adicionalmente se describe una especie de Empoasca Walsh, 1862; género que tiene
una distribución cosmopolita y que taxonómicamente presenta dificultad para la identi-
ficación de sus especies (STERLING, 1982); debido al gran parecido que presentan éstas ex-
ternamente, siendo imprescindible el estudio de los genitales internos.
La descripción de las dos especies están basadas fundamentalmente en las caracterís-
ticas de sus genitales internos.
La descripción de los grupos de setas del pigofer en el género Empoasca se realizó se-
gún la clasificación de STERLING (1982). Las medidas de las estructuras se dan en milí-
metros. El material tipo está depositado en las colecciones del Instituto de Ecología y
Sistemática.
197
Hidalgo-Gato
SISTEMÁTICA
Familia CICADELLIDAE
Subfamilia DELTOCEPHALINAE
Tribu EUSCELINI
Género Neocrassana Linnavuori, 1959
Neocrassana alayoi especie nueva
(Figura 1)
Material tipo: Holotipo (macho) recolectado en la Estación Biológica de Mil Cumbres, Pinar
del Río, a la luz.
Diagnosis: Especie robusta, de color verde pálido con sombras pardas en la cabeza, pro-
noto y escutelo. Cuatro manchas negras redondas en el margen anterior de la corona.
Elitros hialinos con dos celdillas subapicales. Presentan un apéndice en el pigofer en
forma de espina, recta.
W
| :
Figura 1. Neocrassana alayoi especie nueva. A-E: Estructuras genitales del macho: A, cápsula
genital, vista lateral; B, placas genitales, vista lateral; C, estilo derecho, vista lateral; D, conecti-
vos, vista dorsal; E, aedeagus, vista lateral.
Figure 1. Neocrassana alayoi, new species. A-E: Male genitalia: A, genital capsule, lateral view;
B, genital plates, ventral view; C, right style, lateral view; D,conective, dorsal view; E aedeagus,
lateral view.
D
128
Nuevos Cicadelidos de Cuba
Descripción del holotipo: Longitud 4,5. Robusta, de color general amarillo pálido y
algunas sombras pardas en el margen posterior de la corona, pronoto y escutelo. Margen
anterior del pronoto con cuatro manchas redondas negras, las dos centrales más pequeñas.
Corona redondeada de longitud uniforme más ancha que el pronoto, con la sutura co-
ronal bien definida. Rostro largo. Frontoclipeo ancho hacia la parte superior. Región
frontal redondeada hacia el rostro. Élitros hialinos con apéndices diferenciados, con dos
celdillas subapicales. Espinulación de la tibia anterior: 1+4 y del femur posterior: 2+1.
Genitales: Pigofer ancho, lóbulos laterales con macrosetas y apéndice recto en forma
de espina, aserrado y de color negro (Fig. 1A). Valvas genitales largas con macrosetas
uniseriadas y algunos pelos finos en el extremo distal (Fig. 1B). Estilos con macrosetas,
apófisis redondeadas, ángulo preapical distintivo (Fig. 1C). Conectivos cortos y anchos,
en forma de Y (Fig. 1D). Aedeagus robusto (Fig. 1E).
Distribución: Sólo se conoce de la localidad tipo.
Etimología: Nombrada en honor del Dr. Pastor Alayo, entomólogo cubano que dedicó
gran parte de su vida al estudio de los homópteros.
Discusión: N. alayoi, especie nueva, presenta características afines a N. punctiger
Linnavuori, 1959, descrita de Panamá, como son las cuatro manchas en el margen ante-
rior de la corona y la forma del aedeagus, además que presentan apéndices parecidos. Se
diferencia en que el aedeagus en N. alayol, especie nueva, es más robusto y el apéndice ven-
tral del pigofer es en forma de espina recta.
Subfamilia TYPHLOCYBINAE
Género Empoasca Walsh, 1862
Empoasca guajaibona especie nueva
(Figura 2)
Material examinado: Holotipo (macho), recolectado en el Pan de Guajaibón, Mil Cumbres, pro-
vincia de Pinar del Río. Paratipos (1 hembra) de la misma localidad y (1 macho) de Sierra Chi-
quita, Mil Cumbres, Pinar del Río. Además se examinaron nueve ejemplares.
Medidas del holótipo (parátipos entre paréntesis): Longitud del cuerpo: 2,52
(2,55-2,53). Longitud de la corona: 0,18 (0,23-0,21). Ancho de la corona 0,63 (0,78-
0,63). Ancho interocular 0.31(0.44-0.28). Ancho del pronoto 0,63 (0,68-0,60). Longi-
tud del pronoto 0.23 (0.28-0.26).
Diagnosis: Especies pequeñas, de color verde claro. Espina dorsal del pigofer dividida
en tres ramas de tamaño diferente. Aedeagus sin procesos.
Descripción del holotipo: Especie pequeña, color verde claro con marcas blancas so-
bre la cabeza, pronoto y escutelo. Élitros hialinos. Rostro verde claro.
129
Hidalgo-Gato
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Figura 2. Empoasca guajaibona, especie nueva. A-F: Estructuras genitales del macho: A, cáp-
sula genital, vista lateral; B, placa genital, vista lateral; C, estilo, vista lateral; D, proceso del pi-
gofer, vista ventral; E, espina anal, vista dorsal; F, aedeagus, vista lateral.
Figure 2. Empoasca guajaibona, new species. A-F: Male genitalia: A, genital capsule, lateral
view; B, genital plate, lateral view; C, style, lateral view; D, pigofer process, ventral view; E,
anal hook, dorsal view; F, aedeagus, vista lateral.
130
Nuevos Cicadelidos de Cuba
Genitales: Pigofer (Fig. 2 A) redondeado en el margen posterior, con macrosetas en
el ápice. Placas genitales (Fig. 2 B) extendidas lateralmente, con el extremo apical curvado
hacia arriba; se presentan diferentes grupos de setas en vista lateral: un grupo A de setas
(6) más largas y finas que el grupo B (22), éste último con setas muy cortas y uniseriadas
hacia el extremo distal de la placa; el grupo C (21) distribuidas irregularmente hacia la base
y uniseriadas hacia el ápice de la placa; el grupo D está formado por numerosas setas
muy finas y largas. Estilos (Fig. 2 C) en vista lateral sinuados, estrechos hacia la parte
distal, ápice truncado y dentado por un lado. Procesos del pigofer (Fig. 2 D) delicados, li-
geramente sinuados y terminados en punta. Espina anal del pigofer (Fig. 2 E) dividida
en tres ramas, la primera rama más pequeña, la segunda curva, la tercera recta y muy
larga, con extremos distales redondeados. Aedeagus (Fig. 2F) en vista dorso lateral ancho
y fuertemente curvado hacia la base, la mitad anterior, o preatrio, alargada con el ápice re-
dondeado.
Distribución: Pan de Guajaibón y Sierra Chiquita, Mil Cumbres, Pinar del Río.
Etimología: Nombre específico alusivo a la localidad tipo, Pan de Guajaibón.
Discusión: Por sus características externas es similar al resto de las especies del género,
pero el hecho de presentar la espina anal con tres ramas hace que Empoasca guajaibona
especie nueva sea diferente a todas las especies del género. La espina anal de Empoasca
guajalibona especie nueva en vista lateral, se parece a la que muestra Empoasca gosypi des-
crita de Puerto Rico por CALDWELL Y MARTOREL (1950), sin embargo, ésta última presenta
sólo dos ramas a diferencia de la especie descrita en este trabajo.
AGRADECIMIENTOS
A los compañeros de la Empresa de Flora y Fauna del Área Protegida de Mil Cumbres,
en especial a su director Juan Alberto Nogueira por la atención y apoyo en la realización
del proyecto “Diversidad de Invertebrados de la Sierra del Rosario”, a Rafael Carbonel quien
se integró a nuestro grupo de trabajo durante los viajes de recolecta y en general a todos
los habitantes del lugar.
BIBLIOGRAFÍA
CALDWELL, J. S. Y L. F. MARTORELL, 1950. Review of the Auchenorrhynchous Ho-
moptera of Puerto Rico. Van Nostrand Reinhold Co. New York, 300 pp.
LINNAVUORI, R. 1959. Revision of the Neotropical Deltocephalinae and some related
subfamilies (Homoptera). Ann. Zool. Soc. Vanamo Tomo. 20 (01): 370.
STERLING, P. S. 1982. A taxonomic study of the leafhoppers Genus Empoasca (Ho-
moptera: Cicadellidae) in Eastern Peru. Tech. Bull. 272:194.
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Avicennia, 2000, 12/13: 133-134 NOTAS BREVES
Parthenogenesis in Amblypygi (Arachnida)
Partenogénesis en Amblypygl (Arachnida)
Luis F. de Armas
Instituto de Ecología y Sistemática, Apartado 8029, Habana 8, C. P. 10800, Cuba
Key words. Amblypygi1, Charinidae, Charinus, parthenogenesis, Cuba.
Palabras claves. Amblypygi, Charinidae, Charinus, partenogénesis, Cuba.
Parthenogenesis is a rather common phenomenon among mites (PALMER AND NOR-
TON, 1991), but it is very rare in scorpions (LOURENCO AND CUELLAR, 1994), spiders
(Monteroso, 1947; DEELEMAN-REINHOLD, 1986; LAKE, 1986), schizomids (REDDELL
AND COKENDOLPHER, 1995), and opilionids (TSURUSAKI, 1986). Hitherto, parthenogenesis
had not been known within whip spiders (Amblypygi).
Charinus acosta (Quintero, 1983) (Amblypyg1: Charinidae) is the most widespread cha-
rinid species from Cuba (ARMAS AND PÉREZ GONZALEZ, 1997), but males have never
been collected.
On March 24, 2000, L. F. Armas and A. Ávila Calvo collected ten females and juve-
niles of C. acosta, in a small wooded area at the Institute of Ecology and Systematics
(IES), Capdevila, Boyeros, Ciudad de La Habana province (23% 01” 58” N, 82* 22” 43
W). The whip spiders were found in the soil, under rubbishes covered with litter. This cha-
rinid population seems to be introduced by man (ARMAS AND PÉREZ GONZALES, 1997).
Each of the specimens was individually keep in a jar containing soil and debris. As food
were supplied larvae, workers, and winged termites (Vasutitermes rippertit).
One of the adult females moulted on April 25, 2000 (exuvia carapace median length:
1,55 mm). It layed eggs, without mating, on May 26 (31 days after moulted), and the
eggs produced prenymphs on July 28; the first moult ocurred seven days later.
A second adult female moulted on May 23 (exuvia carapace median length: 1,95
mm). It was ovigerous, without mating, on June 28 (36 days after moulted). On August 30,
the protonymphs were already actives on the substrate.
One of the collected inmature specimens moulted on April 29, 2000 (exuvia carapace
median length = 1,30 mm), and later on May 30 (exuvia carapace length = 1,50 mm). It
layed eggs, without mating, on July 4 (35 days after last moulting), but the egg sac was dro-
ped about 17 days later. Nevertheless, on August 30 this female layed eggs again.
Since: (1) males are unknown in this species (we have examined more than 60 fema-
les from several localities), and (2) during moulting the female amblypygid spiders loose
all stored spermatozoa (WEYGOLDT, 1999:104), our observations confirm that C. acosta is
an obligate parthenogenetic species.
133
Luis de Armas
According with P. WEYGOLDT (in litt., June 28, 2000), “1t was assumed that Charinus
ioanniticus (Kritscher, 1959) may reproduce parthenogenetically, because only females
(about 20) were found at the type locality in Greece, but recently Kovarik found the
same species in Turkey, and found males. Perhaps only the Greek population is without
males.” For this reason, C. acosta may be considered as the first case of parthenogenesis
demonstrated among Amblypygi.
ACKNOWLEDGEMENTS
I thank to Arturo Ávila Calvo (IES) for help in collecting C. acosta specimens. Peter
Weygoldt (Albert-Ludwigs-Universitát, Germany), Naomi Cuervo Pineda (IES), Antonio
Melic (Sociedad Entomológica Aragonesa, Spain), and Marcos Méndez (S.E.A., Spain),
provided utile information and literature. Alberto Coy Otero, Lourdes Rodríguez Schet-
tino, and Abel Pérez González (IES) revised the manuscript.
BIBLIOGRAPHY
ARMAS, L. F. DE 6 A. PÉREZ GONZALEZ. 1997. Primer registro de Charinus acosta (Amblypygi: Charontidae)
para el occidente de Cuba. /V Simposium of Zoology, La Habana, Abstracts p. 83.
DEELEMAN-REINHOLD, C. L. 1986. Disdera hungarica Kulczynski — A case of parthenogenesis? Actas X
Congr. Intern. Arachnol., Jaca, España, 1: 25-31.
LAKE, D. C. 1986. Possible parthenogenesis in the huntsman spider Isopoda insignis (Araneae, Sparassidae). J.
Arachnol. 14: 129.
LOURENCO, W. R. AND O. CUELLAR. 1994. Notes on the geography of parthenogenethic scorpions. Biogeo-
graphica 70(1): 19-23.
MONTEROSO, B. 1947. Nuovi dati sulla partenogenesi naturale degli Araneidi. Rendiconti Accad. Naz. Lincei 8,1
(3): 340-345.
Norton, R. A. 8 S. C. Palmer. 1991. The distribution, mechanisms and evolutionary significance of partheno-
genesis in oribatid mites. Pp. 107-136. In: The Acari. Reproduction, development and life-history strategies
(R. Schuster $ P. W. Murphy, eds.), Chapman 4 Hall, London.
REDDELL, J. R. 8 J. C. COKENDOLPHER. 1995. Catalogue, bibliography and generic revision of the order Schizomida
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TSURUSAKI, N. 1986. Parthenogenesis and geographical variation of sex ratio in two species of Leiobunum
(Arachnida, Opiliones). Zool. Sci. (Tokyo) 3(3):517-532.
WEYGOLDT, P. 1999. Spermatophores and evolution of female genitalia in whip spiders (Chelicerata,
Amblypygi). J. Arachnol. 27:103-116.
134
Avicennia, 2000, 12/13: 135-136
Primer registro de la familia Hahniidae (Arachnida: Araneae)
para Cuba
First record of the family Hahntiidae (Arachnida: Araneae) from
Cuba
Arturo F. Ávila Calvo
Instituto de Ecología y Sistemática, Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente,
Apartado Postal 8029, La Habana 10 800, Cuba.
Palabras claves: Arachnida, Araneae, Hahniidae, Cuba.
Key words: Arachnida, Araneae, Hahniidae, Cuba.
INTRODUCCIÓN
La familia Hahniidae Bertkau, 1878 está representada por más de 25 especies desde Nor-
teamérica hasta México, ninguna de las cuales, hasta el momento, hallada en nuestro Ar-
chipiélago (GERTSCH, 1934, OPELL Y BEATY, 1976 y PETRUNKEVITCH, 1929). PETRUNKE-
VITCH (1929) cita para Puerto Rico a Hannia ernesti Simon descrita para Venezuela y
San Vicente. Estas son arañas pequeñas (2-6 mm), tienen ocho ojos, construyen telas en
forma de sábana en las oquedades del suelo, y son fácilmente distinguibles por la dispo-
sición transversal de sus tres pares de hileras (las hileras medias no son segmentadas) y por
la presencia de un amplio espiráculo entre las hileras y el surco epigástrico en la parte
ventral del abdomen.
RESULTADOS
En expediciones realizadas a El Palenque, Sierra del Cristal, provincia de Holguín,
Cuba, fueron colectados dos ejemplares de la familia Hahniidae, una hembra subadulta
(agosto/1998) y una hembra juvenil (octubre-noviembre/1998). Se encontraron en un
bosque siempre verde con elementos de charrascal, el lugar de colecta está en una zona
abierta, donde la capa de hojarasca es pobre (2-5 cm) y fueron colectadas cerca de unos
arboles caídos, en unos curujeyes del género Thillansia. Por sus caracteres morfológicos
externos (espiráculo más cerca de las hileras que del surco epigástrico, y ojos medios an-
teriores más pequeños que los ojos medios anteriores), estos ejemplares pertenecen in-
discutiblemente al género Hahnia Koch, 1841. Dado el estado de inmadurez de los
135
Avila Calvo
ejemplares examinados, no es posible determinar con precisión, si corresponde a alguna
de las especies ya conocidas, aunque exhiben una alta similitud (por la forma del esternón,
la disposición y forma del espiráculo, por el patrón del cefalotorax y el abdomen ilustra-
dos en PETRUNKEVITCH (1929)) con Hahniia ernesti Simon, 1888. Este constituye el pri-
mer registro de la familia Hahniidae para Cuba. El material examinado se halla depositado
en el Instituto de Ecología y Sistemática.
AGRADECIMIENTOS
A los colegas Giraldo Alayón García, Museo Nacional de Historia Natural, y Luis F.
de Armas, Instituto de Ecología y Sistemática, por las oportunas sugerencias y la ayuda para
la realización de este trabajo, al Lic. Juan P. Soy Cahyuela por integrarme a su proyecto.
Este trabajo fue realizado dentro del proyecto ALMIQUÍ, del Estudio diagnóstico de la flora
y la fauna de los habitats de montaña del este de Cuba, en colaboración con la Empresa Na-
cional para la Protección de la Flora y la Fauna y el Jersey Wildlife Preservation Trust, del
Reino Unido.
BIBLIOGRAFÍA
GERTSCH, W. J. 1934. Some American spiders of the family Hahniidae. Am. Mus. Novit., 712: 1-26.
OPELL, B. D. Y BEaATY, J. A. 1976. The Neartic Hahniidae (Arachnida: Araneae). Bull. Mus. Comp. Zool.,
14(9): 39-433.
PETRUNKEVITCH, A. 1929. The spiders of Porto Rico. Trans. Connecticut Acad. Arts Sci., 29, págs. 78 y 79.
Avicennia, 2000, 12/13: 137
Presencia de Chiridota rotifera (Pourtales, 1851) (Echinoder-
mata: Holothuroidea) en aguas del Archipiélago Cubano
New record of Chiridota rotifera (Pourtales, 1851) (Echinoder-
mata: Holothuroidea) in the Cuban Archipelago waters
Rosa del Valle García*, Francisco Solís-Marín** y Alfredo Laguarda**
*Instituto de Oceanología, CITMA, Ave 1'*n* 18406, Playa, La Habana, Cuba.
** Sistemática y Ecología de Equinodermos, Instituto de Ciencias del Mar y Limnología,
Universidad Nacional Autónoma de México, Apd. Pos. 70-305, México D. F. 04510, México.
Palabras claves: Echinodermata, Holothuroidea, Chiridota rotifera, Cuba.
Key words:: Echinodermata, Holothuroidea, Chiridota rotifera, Cuba.
SISTEMATICA
ORDEN APODIDA Brandt, 1835
Familia CHIRIDOTIDAE Orstergren, 1898
Género Chiridota Escholtz, 1829
Chiridota rotifera (Pourtales, 1851)
Synapta rotifera Pourtalés, 1851. Proc. Ame. Asso. for the Advancement of Science, 8-16
Material examinado: Un ejemplar de 3 cm de largo y 4 mm de diámetro colectado en junio de
1997 debajo de un fragmento de coral a 2 m de profudidad, en la zona trasera del arrecife de playa
“La Francesita” (23%05'55”N, 82%28'16”W). Depositado en las colecciones del Instituto de Ocea-
nología (CITMA).
RESULTADOS
Se registra por primera vez la especie Chiridota rotifera (Pourtates, 1851) en las
aguas del Archipiélago cubano. Esta pequeña holoturia, cuya talla máxima es de 10 cm,
tiene una distribución geográfica que abarca desde Bermudas al Brasil y habita desde la
zona intermareal hasta 10 m de profundidad (HENDLER, MILLER, PAWSON Y KIER, 1995).
BIBLIOGRAFIA
HENDLER, G., MILLER, J. E., PAwson, D. L. Y KIER, P.M. 1995. Sea stars, sea urchins and allies. Echinoderms
of Florida and the Caribbean. Smit. Press. Washington, 390 pp.
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BARLOW, G. M. 1974. Contracts in social behaviour between Central American ciclid fishes
and coral reef surgeon fishes. Am. Zool., 14 (3): 9-34.
HARTMAN, O. 1968. Atlas of errantiae polychaetous annelids from California. Allan Hancock
Foundation, University of Southern California, Los Angeles, 828 pp.
JONES, N. S. 1971. Diving. En: Methods for the study of marine benthos. N. A. Holme y A. D.
McIntyre (eds.). IPB Handbook, No. 6, pp. 71-79.
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Dpto. de Biología de Organismos y Sistemas
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ÍNDICE
Avicennia, 12/13, 2000
Distribución de los octocorales en Majahual, costa de Quintana Roo, México
DAMIEL TORRUCO:Y M. ALICIA ONZALÉEZ. .cooioricnnmo pasados vanpis vaalvadecidd oy EA AN ]
Aplicación de modelos estocásticos en la evaluación de hipótesis generadas por datos de avista-
mientos de mamíferos marinos
J. AxIS-ARROYO, D. TORRUCO, M. A. GONZALEZ Y B. MORALES-VELA....cccoconccnconccnoonosss 11
Nuevos registros para la ictiofauna marina de Cuba.
RODOLFO CLARO, RICHARD G. GILMORE, C. RICHARD ROBINS Y JOHN E. MCCOSKER............ 19
Composición y abundancia de la comunidad de aves terrestres durante la migración otoñal en la Pe-
nínsula de Hicacos, Matanzas, Cuba |
HIRAM GONZALEZ, ESTEBAN GODINEZ Y PEDRO BLANCO....ccoconcoccnnoconencnnnonccrnna roca rarnanannnns 25
Definición, relaciones filogenéticas y grupos morfológicos de especies del taxon “Macromischa” (Hy-
menoptera: Formicidae: Leptothorax).
JORGE Luís FONTENLA RIZO. «ri sastnoma poc nidoniiis dinar 4aridnnoo pa nndvd AAA DRNA REN 35
El género Typhlatya (Crustacea: Decapoda) en Cuba, con la descripción de una nueva especie
AUGUSTO JUARRERO DE VARONA Y MANUEL ORTlZ...ccoconcocococoniononoonononacónnccnn nono acanenoonacanos 45
Una nueva especie de misidáceo marino del género Amathimysis Brattegard, 1969 (Mysidacea,
Mysidae), de aguas cubanas
MANUEL ORTIZ, ROGELIO LALANA Y ANNA SANCHEZ-DIAZ...ococonccoccnonncananancnanconcrararancanos 3)
Una nueva especie de anfípodo espongícola del género Hoplopheonoides Shoemaker, 1956 (Gam-
maridea; Cyproideidae), de Cuba
MANUEL ORTIZ, ROGELIO LALANA Y ANNA SANCHEZ-DIAZ.....occcococonocconononanaccrnnanconcnccn nens 63
Los equinoideos (Echinodermata: Echinoidea) del Archipiélago cubano
MERCEDES ABREU, FRANCISCO SOLIS-MARIN Y ALFREDO LAGUARDA-FIGUERAS....cccnconomonos.: 69
Nueva especie del género Janolus Bergh, 1884 (Mollusca: lena de Cuba y Costa Rica.
JESUS ORTEA Y JOSÉ ESPINOSA... .ocasuscaionitinein dopo nea drer aldo dnas orale VAR DAR AGRA 79
Nueva especie del género Okenia Menke, 1830 (Mollusca: Nudibranchia) de Cuba
JESUS ORTEA Y JOSÉ ESPINOSA .uciuransidass quier hdi anaricsr divo arden ride AUR ro O E 84
Nueva especie del género Thuridilla Bergh, 1872 (Mollusca: Sacoglossa) de Cuba y Costa Rica
JESUS ORTEA Y JOSÉ.ESPINOSA2isjit ontrnahoqon cadenas ense or valide AD aRRa OE ad 87
Datos anatómicos de Prunum holandae (Mollusca: Neogastropoda: Marginellidae)
JOSÉ ESPINOSA Y JESUS ORTEAL iros arder lios cra die iaa A 91
Descripción de un género y once especies nuevas de Cystiscidae y Marginellidae (Mollusca: Neo-
gastropoda) del Caribe de Costa Rica
JOSÉ ESPINOSA Y JESUS ORTÉA ¿caninas o dE 95
Nuevos registros de Neréididos (Polychaeta: Nereididae) para las Islas de Cabo Verde y Canarias
JORGE NUÑEZ, RODRIGO RIERA Y MARIA DEL CARMEN BRITO.....occcncnconanconanonanenanranananon 115
Dos nuevas especies de cicadélidos (Homoptera: Cicadellidae) y registro del género Neocrassána
Linnavuori, 1959, para Cuba
MARTA M. HIDALGO= GATO... ¿00uiviin eras nirartones orar VOPUr RATES AAN A AN 127
Notas breves:
Partenogénesis en Amblypygi (Arachnida)
LUIS F. DE ÁRMAS.... ios. i3tocwnntentiorrelrab decirte brota ria coral a 133
Primer registro de la familia Hahniidae (Arachnida: Araneae) para Cuba
ARTURO F. ÁVILA: CALVO valia 0 135
Presencia de Chiridota rotifera (Pourtales, 1851) (Echinodermata: Holothuroidea) en aguas del
Archipiélago Cubano
ROSA DEL VALLE GARCIA, FRANCISCO SOLIS-MARIN Y ALFREDO LAGUARDA.....ccccocornoos: 137
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