HISTORIA FISICA, POLITICA Y NATURAL DE LA ISLA DE CUBA POR D. RAMON DE LA SAGRA. FORAMINIFERAS POR ALCIDES D'ORBIGNY CABALLERO DE LA REAL ÓRDEN DE LA LEGION DE HONOR, OFICIAL DE LA LEGION DE HONOR BOLIVIANA, AUTOR DEL VIAJE А LA AMÉRICA MERIDIONAL, etc., etc. Mo. Bot. Garden, 1897. PARIS. EN LA LIBRERIA DE ARTHUS BERTRAND, LIBRERO DE LA SOCIEDAD DE GEOGRAFIA, CALLE HAUTEFEUILLE, N° 23, М. DCCC. XL. PARIS. — IMPRENTA DE MAULDE Y RENOU, CALLE BAILLEUL, № 9 Y 11. FORAMINIFERAS POR ALCIDES D'ORBIGNY CABALLERO DE LA REAL ÓRDEN DE LA LEGION DE HONOR, OFICIAL DE LA LEGION DE HONOR BOLIVIANA , AUTOR DEL VIAJE А LA AMÉRICA MERIDIONAL, €tc., etc. FORAMINIFERAS. INTRODUCCION. Topo lo que en la naturaleza no es apreciable á simple vista, no solamente per- manece desconocido á la masa de las poblaciones, sino que se sustrae tambien por siglos enteros á la observacion de los hombres especiales que intentan poner de manifiesto las bellezas de la creacion. ¡Cuantas millaradas de seres nos faltan co- nocer! ¡cuantos años transcurrirán todavía antes que hayamos adquirido una idea exacta del conjunto de la zoología! Si el volúmen imponente de los animales mas corpulentos de nuestro globo nos hace prorrumpir en exclamaciones acerca del poder infinito de la virtud crea- triz, si la regularidad de sus formas, la complicacion de sus órganos, la riqueza de su mecanismo vital vienen á mostrarnos su exquisita perfeccion, nuestro espí- ritu no se asombra menos, nuestra admiracion no es menos viva, cuando descen - demos á esos seres inobservados cuyo número compensa su extrema pequeñez, y cuya multiplicidad es tal que representan sin saberlo nosotros uno de los primeros pa- peles en el conjunto de la naturaleza. En efecto, ¿quien no se asombraría al pensar que la arena de todo el litoral de los mares está de tal suerte llena de estas conchas microscópicas, á las que hemos dado el nombre de ForAMINIFERAS, que se puede decir que las mas veces está por mitad compuesta de ellas? Plancus’ ha contado seís mil en una onza de arena del Adriático, y nosotros hemos encontrado hasta 480,000 por tres grammes (una sola dragma), de arena escojida de las Antillas, ó 3,840,000 en una onza. Estas pro- porciones multiplicadas en escala mas vasta, en una vara cúbica por ejemplo, exceden todas las previsiones humanas y aumentan ya tanto el número de las decimales que cuesta trabajo posesionarse de él; ¿pues que será por poco que se 1 Ariminensis de conchis nimus notis. 8 FORAMINIFERAS. extienda á la inmensa superficie de las costas marítimas del globo? Desde luego se tendrá la certidumbre de que ninguna otra serie de seres puede compararse á ésta por el número, ni aun aquellas miralladas de pequeños crustaceos que en una inmensa extension de los mares vienen á colorear la superficie * y alimentar а los animales mas voluminosos, como las Ballenas, ni aun aquellos animales infusorios de las aguas dulces cuyos esqueletos componen en parte la masa de los trípolis del comercio *, porque éstos son reducidos en sus límites, mientras que hai Foramini- niferas en todas las costas. No hablaremos de los animales de gran tamaño, aunque su superficie individual sea mui á menudo bastante extensa, su proporcion numérica y el espacio que ocupan sobre la tierra no son realmente nada en la balanza. ¿Queremos ver que papel pueden representar en la naturaleza los cuerpecitos que nos ocupan, muchos de los cuales no llegando á la mitad, la cuarta ó la sexta parte de un punto? No tendremos menos ocasion de admirarnos. El estudio que hemos hecho de la arena de todas las partes del mundo nos ha demostrado que sus restos forman en gran parte bancos que embarazan la navegacion, vienen á obstruir los golfos y los estrechos, cegar los puertos * y formar con los corales esas islas que salen cada dia del seno de las aguas en las regiones cálidas del Grande Oceano. Si se juzga del papel actual de las Foraminiferas por lo que se ve en las capas de la corteza de la tierra, habrá tanto mayor convencimiento de lo que aca- bamos de asegurar de las especies vivas y nos será fácil demostrar con hechos que entran por gran parte en la composicion de capas enteras. Si comenzamos por las mas aproximadas á nuestra época , por las capas terciarias, las cercanías de Paris mejor que ningun otro sitio nos darán una prueba la mas evidente. Las calizas groseras de este vasto depósito están en ciertas partes tan atestadas de Foraminife- ras, que una pulgada cúbica (veinte y siete milímetros) de las canteras de Gentilly nos han ofrecido mas de cincuenta y ocho mil, y esto en las capas de una gran potencia en una inmensa superficie, resultado que hace suponer por vara cúbica cerca de 3,000,000,000 en la totalidad, y nos dispensa de llevar mas allá los cálcu- los. Por tanto se puede concluir sin exageracion que la capital de Francia está casi edificada con Foraminiferas, lo mismo que las ciudades y puertos de algunos de los 1 En las aguas del Brasil hemos visto en mas de un grado з Academia de ciencias de Berlin, 29 de julio de 1837, ó de superficie, ó veinte leguas marinas, el mar coloreado de Annales des Sc. nat., t. УШ, р. 374. rojo por una especie del género CernocnYLus, que segun los 3 El puerto de Alejandría sondeado en el fondo del agua Balleneros es el alimento casi exclusivo de los Cetaceos de bar- nos ha mostrado treinta y cinco pies de espesor de capas, por bas. Véase nuestro Viaje á la América meridional, parte his- decirlo asi, de Foraminiferas. Debemos á la complacencia de tórica, t, I, pág. 17. M. Lefebre, al que la ciencia es deudora de muchos hechos nuevos, la comunicacion del resultado de este sondeo, INTRODUCCION. 9 departamentos que la rodean. Las Foraminiferas no son menos comunes en los terrenos terciarios, desde Champagne hasta el mar, y el número es prodigioso en los depósitos de la Gironda, de Austria, Italia, etc., etc. Las capas cretaceas con- tienen tambien millares de ellas, como lo atestiguan las Nummulitas de que está construida la mayor de las pirámides de Egipto: y la gran cantidad de estos cuer- pos de que está formada la creta blanca ғ desde Champagne de Francia hasta Inglaterra. Las encontramos tambien hasta en las capas mas inferiores de la for- macion jurasica ú oolítica; así estas conchas que apenas alcanza la simple vista, no solo cambian hoi dia la profundidad de las aguas del mar y modifican conti- nuamente el fondo, sino que han formado antes de nuestra época montañas y re- llenado depósitos de una extension considerable. Estos seres tan numerosos han estado desconocidos durante siglos enteros. Los primeros han sido vistos en 1731 por Beccarius? en las arenas del Adriático; este mar que por mucho tiempo se ha creido era el solo que poseía conchas Foramini- feras, sirvió de objeto á las observaciones de muchos autores y excepto algunas es- pecies vivas señaladas en Inglaterra por Walker y Boys‘ y algunas fosiles de Paris descritas por Lamarck á principios de este siglo* se ignoró, por decirlo así, la existencia de las Foraminiferas en las otras partes del mundo hasta 1825, época en la que presentamos nuestro primer trabajo sobre la totalidad de estas conchas que ya entonces habiamos encontrado por todas partes”. Se debe atribuir el olvido en que han estado las Foraminiferas á la dificultad de la observacion y al poco aliciente que tiene por lo general el ocuparse de cuer- pos no perceptibles á simple vista; sin embrago, hai pocos ramos de estudio que estén mas á el alcance de todo el mundo y cuyos resultados puedan ofrecer mas importancia real. Decimos que está á el alcance de todo el mundo, en el sentido de que colocado no importa donde sea, en las costas de las diversas porciones del globo terrestre ó en partes de los continentes cubiertas por terrenos terciarios, cretaceos ú oolíticos, en todas partes, decimos, el observador encuentra bajo sus pies y en una sola pulgarada de arena una gran cantidad de Foraminiferas que puede estudiar con el único auxilio de un lente. Por la importancia real de su 1 Geographie de Strabon, t. V, lib. хуп, р. 397, Niebuhr, Yoy., t. 1, pág. 161, Descript. de} Egypte, Hist, nat., t. П, pág. 196, Arlas miner., lám. 5, fig. 9. è Véase nuestro trabajo especial sobre las Е ini de tante crecidas para ser observadas aun en tiempo de Strabon y que han sido despues objeto de controversias curiosas. 4 Testacea minuta rariora nuperrime detecta in arena lit- loris dwi la creta blanca del depósito de Paris, Mémoires de la société géologique de France. + De Bononiensi arena quadam (Comment, Acad. Inst. Bolon.), t. І, pág. 68. No comprendemos en esta revista mas que las Foraminiferas ordinarias y no las Nummulitas, bas- INTROD. * 1804, Annales du Muséum, t. V, pág. 182. ê Presentado á la Academia de ciencias el 7 de noviembre de 1825 6 impreso en enero de 1826 en los Annales des sciences naturelles. Este trabajo era ya el fruto de seis años consecutivos de pesquisas y observaciones microscópicas. 10 FORAMINIFERA s. estudio creemos no haya serie animal que ofrezca mas facilidades y ventajas al geólogo y al zoólogo: al primero para determinar la temperatura de los parages donde vivian las especies perdidas, en comparacion á lo que vemos ahora en los mares, y para explicar la formacion de las capas (cuestiones de la mas alta importancia para la historia de nuestro planeta); al segundo por su admirable diversidad, por la elegancia de sus formas, por la singularidad de su organizacion y en fin por constituir una clase de las mas numerosas del reino animal y hacer á pesar de su pequeñez un papel inmenso en la naturaleza. Solo despues de ha- bernos penetrado bien del pensamiento de que faltaba llenar una laguna en las ciencias naturales, es como sin retraernos por la especie de indiferencia que se ha mostrado á esta clase de animales tan interesante, hemos hace cosa de veinte años proseguido sin cesar nuestras investigaciones para llegar á resultados generales, de los cuales vamos á dar á conocer aquí alguna parte, esperando nuestra publicacion completa. Cuando D. Ramon de la Sagra tuvo á bien encargarnos de una gran parte de la zoología de las Antillas, nos remitió con sus colecciones un poco de arena de la isla de Cuba, cuya riqueza en conchas Foraminiferas reconocimos al instante; hizo que viniesen nuevas arenas de la isla que nos ocupa, mientras que á nuestro ruego M. Fernando de Candé, oficial de marina tan instruido como celoso naturalista, cuya amistad habiamos cultivado en nuestros viajes, nos traia despues de una larga permanencia en las Antillas no solo materiales preciosos acerca de la isla de Cuba, sino tambien arenas de Haiti, Santo Tomas, la Jamaica, la Martinica y la Guadalupe, lo que nos permitia ocuparnos de un trabajo extenso sobre el archipiélago caribe. Un año de pesquisas y de observaciones nos convenció de que Cuba por su vasta extension, por el favor de su posicion hallándose colocada al viento y corriente de las otras islas, mantiene en sus costas todas las especies de Foraminiferas que se encuentran al mismo tiempo en el litoral de las Antillas, mientras que por el contrario las especies de Cuba no están repartidas igualmente en el resto del archipiélago. Llegamos todavía á un resultado no menos importante y es que por la multiplicidad de especies que se encuentran en Cuba ningun otro pais, excepto el Adriático, puede comparársele en riqueza, puesto que hemos des- cubierto ciento diez y siete, duodécima parte del total de Foraminiferas que co- nocemos hasta la presente. Estos resultados habiendo sido comunicados al Sr. de la Sagra, este sabio siempre dispuesto á propagar las ciencias en su pais, deseó que esta obra destinada á la España у á la mas rica como mas importante de sus colonias de ultramar, Cuba, no solamente contuviese todas las especies propias de esta isla sino que hasta sir- INTRODUCCION. 11 viese de base al estudio de las Foraminiferas, conteniendo entonces nuestras con- sideraciones generales, nuestra clasificacion y los caracteres suscintos de todos los géneros á fin de presentar el cuadro completo de conocimientos acerca de esta clase de animales. Para llenar sus intenciones es para lo que damos aquí de antemano un Genera y el resúmen de las observaciones generales que contamos publicar mas adelante en una obra especial sobre las Foraminiferas vivas y fosiles, de las que nos ocupamos hace ya muchos años. Segun lo que acabamos de decir no hai que esperar el hallazgo de tareas sobre las Foraminiferas de Cuba y las Antillas; en efecto, á excepcion de una especie de Orsicuniva, el Nauticos aduncus, figurado sin indicacion de localidad por Fichtel y Moll», y que hemos reconocido como propio de las Antillas, nada, ab- solutamente nada, ha sido hecho todavía para su estudio en esta parte del muevo mundo, á no ser una veintena de especies que hemos señalado en nuestro primer trabajo, las únicas que conociamos entonces. Ў Para dar bien а conocer la totalidad de las Foraminiferas vamos 4 comenzar рог dirijir una ojeada rápida á los trabajos de que han sido objeto, sin comprender por esto las Nummulitas. Las primeras nociones acerca de su existencia son debi- das а Beccarius” que еп 1731 las señaló en el Adriático sin describirlas ni dibu- jarlas como ya hemos dicho. Plancus en 1739? fué el primero que las dió á conocer por medio de figuras y descripciones; aproxima las conchas enroscadas á los Cuernos de Ammon y las llama Cornu Hammonis, mientras que las especies prolongadas se comparan á semillas de rábano (siliquam raphanistri); figura así nueve espe- cies mui mal caracterizadas, de las cuales solo algunas pueden reconocerse. Tres años despues Gualtieri * habiendo recibido de Plancus arena de Rimini, да nue- vas figuras de las mismas especies, que divide en cuatro géneros, en los que están tambien colocados los grandes Cephalopodes vivos y fosiles; coloca las especies de vueltas envolvientes en el género Nautius, las especies turbinadas en los géneros AMMONIA, las especies derechas en el género OrTHOCERAS; pero considera а las Aga- tistegas (Miliolas) como serpulas y las da con el nombre de TusuLus marinos. Plancus* de nuevo en una segunda edicion del Ph+lobasanos de Fabius Columna, figura en 1744 sin darlas nombre dos variedades de una especie de Foraminiferas. En 1753 Klein * no hizo mas que citar la especie descrita por Plancus en la edi- cion de Fabius Columna, mirándola como un Cuerno de Ammon (Cornu Ham- 1 Testacea microscopica aliaque minuta, 1803. 4 Index testaram conchyliorum, t. ХІХ. ? De Bonionensi arena quadam (Comment, Acad. Instit. + Edicion de Plancus, Florencia, 1744,en 4°, t. XXXVII, Bonon., t. І, р. 68). fig. D, E. > Ariminensis de conchis minus notis, t. 1, fig. 1. è Meth. ostrocalogicæ, etc., р. 2. 12 FORAMINIFER А monis); cuatro años despues, Ginnani ' representa con el mismo nombre tres de las especies de Plancus sin añadir nada á lo que se sabia acerca de estas conchas. Ledermuller» en 1764 hizo otro tanto colocando en sus Cuernos de Ammon las especies sin espiral y de celdillas en una sola línea. Se nota que solo habla como de simples recreaciones de física; sin embargo, es el primer compilador que ha reunido las figuras de Plancus á las que él presentó en número de seis. Linneo en las primeras ediciones de su Systema nature indica en su género NauriLus las especies microscópicas publicadas por los autores que acabamos de citar; pero solo en su novena es en la que las separa en especies, no aplicándoles nombres específicos mas que en la décima; en la duodécima presenta ° la sinonimia completa de Plancus, Gualtieri, Ledermuller y Ginnani * clasificando así todas las conchas multiloculares rectas ó espirales en su género Nautilus. Las conchas microscópicas que describe no son mas que catorce especies; pero lo mismo que Gualtieri coloca entre las Serpulas con el nombre de SERPULA semilunum la única especie Agatistega conocida. Martini * en 1769 en su grande obra continuada por Chemnitz, no escribe mas que como compilador: con el nombre de Zubulus reproduce en sus viñetas todas las especies rectas figuradas por Plancus, Gualtieri y Ledermuller y el SERPULA semilunum de Linneo; en el Naurizus las especies espirales de vueltas envolvien- tes, mientras que las especies turbinadas y aun todavía algunas envolvientes (los PexeropLis) con la denominacion de Cornu Hammonis tomada de sus predeceso- res; así es que no da nada nuevo. Murray* dos años despues no copia mas que una de las especies de Gualtieri; Favane en 1780 en su tercera edicion de Dargen- ville? copia igualmente algunas figuras de Gualtieri, las unas con el nombre de Nautiles тісгоѕсоріјиеѕ y las otras con el de Cornes d Ammon miCTOSCOpiques, considerándolos él así como los representantes en pequeño de las grandes especies fosiles. El mismo año el abate Soldani, general де los Camaldulenses, dió á conocer los primeros resultados de sus minuciosas investigaciones en las conchas mieroscó- picas*, y dió figuras nuevas de muchas especies de Foraminiferas; pero desgracia- damente esta obra, hecha con el objeto de probar la diversidad de formas de estos ' Mare Adriatico, opere postume, t. XIV, р. 111. 2 Amusemens microscopiques, t. IV, t. ҮШ. 3 Systema mature, р. 274 а 283. * Ferussac en su Historia de los Cephalopodes Foraminife- ras, dice equivocadamente que Linneo en su duodécima edicion ha dado la sinonimia de Gronovius, de Martini, de Murray, de Favane, de Schræter, de Boys y Walker y de Adams, pues estos autores no han escrito hasta muchos años despues de 1767, época en que se hizo la duodécima edicion de Linneo. 5 Conchylien cabinet, t, 1, pág. 1. © Fundamenta testaceologic, pl. 1, р. 16. 7 La Conchyliologie ou Histoire natarelle des coquilles, t.1, р. 680, y Zoomorphose, pl. 2, fig. D 1, D 2. * Saggio orittagrafico overo osservazioni sopra le terre nantiliche, ammoniche delle Toscana. INTRODUCCIÓN. 13 cuerpecitos, no tiene sello alguno científico y estuvo ignorada por mucho tiempo de los sabios de esta época. En 1781 Gronovius en una vasta obra ' no hizo, sin embargo, mas que citar con el nombre de Nautius las especies de Plancus; sin dar detalles describe а lo me- nos una especie nueva. En 1783 Schræter *, en un trabajo general sobre las conchas, ofrece, siguiendo Linneo, todas las especies del género NauriLus de este autor, aña- diendo la sinonimia de Martini, de Murray, de Muller, de Gronovius, mezclando los verdaderos Nautilos con las conchas microscópicas. La única especie que da por sus observaciones es el NauriLus helicites tipo de las Nummulitas. Hasta entonces las observaciones recaian principalmente sobre conchas mi- croscópicas del Adriático y fosiles de Italia, y apenas se suponia que existiesen en otra parte, cuando en 1784 Boys y Walker? presentaron su trabajo sobre las de Sandwich, en Inglaterra, en el que figuran cerca de catorce, entre las cuales mui pocas especies han sido descritas por Linneo*. Las figuras representan con el nombre de SerpuLA algunas especies poco reconocibles de Agathistegas, y con el de Мастило todas las especies espirales ó rectas, pero sin nombre específico Adams * tres años despues las impuso al figurarlas una denominacion científica. Spengler * describe algunas especies que ha encontrado en un Buccino de la India y otras procedentes del mar Rojo (algunas de estas especies pertenecen hoi á nuestro género CALCARINA), introduciendo así cuatro desconocidas á los autores ya citados. Se encuentran de nuevo en el catálogo del gabinete de Morsburg? al- gunas de las especies de Linneo. Las cosas se hallaban así cuando en 1789 Gmelin publicó su décimatercia edi- cion del Systema nature de Linneo. Nada cambió de lo que habia hecho este grande hombre; describió con los Nautilos, las Belemnites y la Spirula, todas las especies microscópicas espirales y rectas con el nombre de Nautius, y una milio- lidea, á las SERPULA , añadiendo solamente á las especies de Linneo ocho especies tomadas una en Gronovius, dos en Schrceter, cuatro en Spengler y solo una por sí. Parece que los importantes trabajos de Soldani, de Boys y Walker le eran desconocidos, porque no cita ninguna de las especies de estos autores. El mismo año Soldani * publicó el primer volúmen de un nuevo trabajo mucho mas extenso que el primero, puesto que tiene ciento cuarenta y ocho láminas, pero * Zoophylacium gronovianam, р. 282. $ Schr. Daenish. Ges., L, р. 373, t. П, fig. 9. 2 Einleitang їп die conch., t. 1, p. 9 420. 7 Páginat1, п° 11. 3 Minute and rare shells, etc., p. 1 үр. 18. * Testaceographie a xocphytographie parve el microscopi- + Las especies de Linneo son el №. Beccaríi (por una es- cæ, Sienna, 1789. Los otros volúmenes se han publicado en pecie distinta), el N. crispus y №. calcar, 1798. * Micoscop., р. 640, Dorset catal., р. 42. INTROD, 14 FORAMINIFERAS. de ningun modo superior al primero en cuanto á su importancia científica. Las numerosas Foraminiferas que figura no lo están en bastantes caras para ser bien determinadas, y ha mezclado un gran número de jóvenes Gasteropodes © tal vez Acephalos. Como no cuidaba mas que de la forma exterior hemos reconocido que una sola especie ocupaba veinte y cinco de sus láminas; sin embargo, sería injusto no alabar el celo y paciencia infinita de Soldani que ha consagrado toda su vida á observar estos cuerpecitos al microscopio. Siguió despues en 1773 la compilacion de Schreiber», á quien no se debe mas que la repeticion de las especies de Gmelin, sin alguna nueva adicion; despues nada se presentó acerca de esta serie de seres hasta la publicacion de Faujas sobre la historia de la montaña San Pedro de Maestricht* en 1799, publicacion en la que se halla una especie fosil de la creta, tipo del género SimrroLrES de Lamarck. Lamarck á la cabeza entonces de la enseñanza de las conchas, no habla sin em- bargo en 1801, en la primera edicion de sus 4nímaux sans vertèbres, mas que del género ORTHOCERA, el que conserva para colocar las especies microscópicas de celdillas en una sola línea, sin hacer mencion alguna de las demas formas. El año siguiente Воѕс? en su tratado de las conchas solo habla mui poco: en el género Nautilo describe algunas de las especies microscópicas de Linneo, y en las Or- THOCERA las especies rectas microscópicas y de gran dimension. Su trabajo sobre este particular es bien inferior al de muchos compiladores que hemos citado. En esta época apareció el principio de los trabajos de Denys de Montfort sobre las conchas *, mezcla monstruosa de mentiras y verdades envueltas en una fatigosa verbosidad; y allí fué donde por la primera vez Montfort, desnaturalizando las fi- ‚ guras de Soldani, supo hacer de algunas de sus especies de conchas multiloculares Argonautas microscópicas y Nautilos; pero esta obra es demasiado inferior á la crítica para que hablemos mas de ella. Un año despues de la publicacion de Montfort apareció la mejor obra publicada hasta entonces sobre las conchas microscópicas. Queremos hablar de la de Fichtel y Moll? trabajo en el que los autores han dado las primeras figuras exactas, y las únicas estudiadas zoológicamente: esta obra no contiene mas que una veintena de especies; sin embargo, la consideramos como mui superior á la de Soldani y á to- das las otras publicaciones anteriores. Las especies todavía están reunidas bajo el 1 Berfach einer vollst conch., p. 3 á 8; el género Nauti- > Histoire naturelle des coquilles, t. V, р. 165, 180, 195. LUS, р. 368; el SERPULA semilunam. + Histoire naturelle, générale et particulière des Mol- * Histoire de la montagne Saint-Pierre de Maestricht, — lusques, Buffon, de Sonnini, tomo IV, año X. р. 135. + Testacea microscopica aliaque minuta, 1803. INTRODUCCION. 18 nombre genérico de NAUTILUS, segun el método de Linneo. El trabajo de Montagu ', sobre las conchas de Inglaterra publicado el mismo айо, se aproxima hasta cierto punto al de Fichtel y Moll en las figuras, representando todavía con el nombre de NavuriLus todas las especies descritas por Walker y Boys y Adams; no obstante, se encuentran Agathistegas con la denominacion de Vermicuum oblongum y de Мохосоцоз ғ. э Hasta entonces todas las conchas Politalamas microscópicas habian estado reu- nidas con las grandes conchas en el género Naurmus de Linneo; á Lamarck estaba reservado formar los primeros géneros distintos separándolos enteramente de las grandes especies. En su importante memoria publicada en 1804?, sobre las conchas fosiles de las cercanías de Paris, establece en veinte y tres especies nuevas de los ter- renos terciarios y cretaceos de Paris los géneros DiscorBis, ROTALIA, LENTICULINA, LrruoLa, рома, МїплогА, Rexurres у Gyrocona <, de los cuales algunos han quedado en las nomenclaturas posteriores. El año siguiente M. de Roissy * en la continuacion de los Moluscos, empezados por Montfort, no habla mas que de los géneros ОктносғкА y Rorarres citando las especies. Matton y Racket en 1807 * dan todavía una continuacion de las Poli- talamas microscópicas de Inglaterra; pero este trabajo copiado por los de Walker y Boys, de Adams y de Montagu, contiene apenas algunas especies mas, siempre descritas con el nombre de NauriLus. El órden cronológico nos conduce naturalmente á la obra monstruosa publicada en 1808 por Montfort, obra en la que su autor queriendo completar el número ciento en sus géneros, tuvo que copiar no solamente las figuras de Fichtel y Moll, de Soldani, de Knorr, etc., sino tambien que desfigurarlas y crear otras nuevas para colocar con nombre diferente hasta las variedades de una misma especie. Un solo ejemplo bastará, pues, para probarlo. Los géneros Phoneme, Pharame, Herione, Clisiphonte, Patrocle, Lampadie, Antenore, Robule, Rinocure y Sphincterule de este autor, pertenecen únicamente á dos © tres especies de un solo y mismo género. Parkinson * en 1811 se contentó en su obra sobre los cuerpos fosiles con copiar las diferentes especies de Lamarck, sin añadir nada de nuevo á su asunto. En el extracto de su curso », en 1812, Lamarck, á los géneros indicados en su primera memoria añade los de las Nodosarias y Orthoceras, que coloca con los Be- t Testacea britannica, pág. 186 4 198, y su Supplément é Transaction of the Linnean Soc., р. 114. publicado en 1808. 7 Conchyliologie systématique ( coquilles univalves cloi- з Páginas 497 y 175. sonnées). 2 Annales du Muséam, t. V, рар. 182, 241 y 351. * Organic remains. 4 Este último es un grano de Chara. ? Extrait da cours de zoologie du Muséum. ? Buffon, de Sonnini, t. Y, año ХШ. 16 FORAMINIFERAS. lemnites y los Hippurites; las Spirolinas reunidas á las Spirulas en la misma familia; las Melonitas y las Siderolitas colocadas con los Nautilos en la familia de las Nautilaceas: así se reconoce sin trabajo que mientras que daba nuevas secciones este sabio no habia profundizado mucho el estudio de las especies microscópicas confundidas con los grandes Cephalopodes. En 1817: Cuvier, que no habia podido ver por sí mismo estos cuerpecitos, se contenta con indicar, en su clase de los Cephalopodes, con los NauriLus una gran parte de los géneros de Montfort y de Lamarck, y los demas con las CAMERINAS sin concluir nada acerca de las especies microscópicas, siempre mezcladas con los Ce- phalopodes de gran tamaño. Ferussac », Lamarck * y Bowdich < han presentado todos tres en el mismo año de 1822 métodos sobre los Cephalopodes. El primero coloca en sus Orthoceras á las Nodosarias con las Ichthyosarcolitas; como Lamarck, las Spirulinas con las Spirulas, las Lenticulinas con los Nautilos, y desde entonces las especies mi- croscópicas están mezcladas en todas partes con los Cephalopodes. El segundo no cambia nada de lo que habia hecho en 1812 en el extracto de su curso. El tercero, mientras que introduce algunos de los géneros de Montfort, deja todavía á los Ce- phalopodes propiamente dichos mezclados con las especies microscópicas, sin seguir absolutamente las mismas reglas que Lamarck. El año siguiente (1824) Bronn з y Martins’ han hablado de algunas especies de polithalamas microscópicas, pero de un modo bastante diferente; el primero lo hizo adoptando los géneros de Lamarck, y el segundo, citando solamente las especies de Venecia, las conserva el nombre linneano de NautiLUS y de SERPULA. Se encuentran algunas especies fosiles descritas aun con el nombre de NauriLus : en la hermosa obra sobre los fosiles de Inglaterra, de M. Sowerby ; y M. Defrance* en la misma época, sobre poco mas ó menos, introdujo en la ciencia algunos gé- neros nuevos de conchas polithalamas microscópicas sin presentar hechos descono- cidos sobre el conjunto de estos animales. Nilson * indica tambien algunas especies fosiles de Suecia con los nombres de género de Lamarck. M. de Blainville á principios de 1825 publica su Malacología; pero este sabio obligado todavía á servirse de los pocos hechos conocidos acerca de las especies mi- croscópicas, las mezcla en todas sus divisiones соп los Cephalopodes de separaciones , 1 Règne animal, t. П. 7 Mineral conchology, 1. 121 (Naurus Comploni); la > Tableau systématique. misma especie que la LANTICULINA rolulata de Lamarck. 3 Animanz sans vertèbres, t. VIL. * Dictionnaire des sciences naturelles, articulos Teztalaire, 2 Elémens de Conchyliologíe, р. 15 y siguientes. Saracenaire, Frondiculaire, Planulaire y Fabulaire, * Système des coquilles, ° Acad. Holm., 1825, р. 337, y dos años despues Petre- * Reisenachvenedig, t. II, pág. 437. facta suecana, р. T. INTRODUCCIÓN. 17 siempre recayendo sobre la totalidad de las secciones del todo nuevas y que le son propias. Sucede lo mismo en cuanto а la mezcla con la clasificacion de Latreille >, publicada en el mismo año: solamente el autor cita muchos mas géneros de Mont- fort y reune en el mismo órden todos los géneros microscópicos con los Nautilus, las Spirulas y las Jibias. El caos mas intrincado reinaba entonces en las especies chiquitas, а consecuen- cia de la introduccion de los géneros facticios de Montfort; un gran número de duplicaciones se reproducian en todos los métodos, y el desórden iba aumentando de dia en dia por efecto de la mezcla de las especies microscópicas con los verdade- ros Cephalopodes de concha multilocular. Habiendo reconocido que aun faltaba sacar de las tinieblas un nuevo mundo, que todo estaba sin hacer relativamente á las conchas microscópicas á nuestra en- trada en la ciencia, nos ocupábamos silenciosamente hacia ya seis años, con todo el ardor de la juventud, del estudio comparativo de las especies de diferentes paises y de las diversas capas fosiles, dibujándolas todas á fin de confrontarlas y levantar un nuevo edificio sobre esta serie de seres. Ya en 1823 publicamos la primera en- trega de modelos”, cuyos originales hemos esculpido con arreglo á las secciones ge- néricas que queriamos establecer, á fin de hacer perceptibles á vista todos los carac- teres que tomábamos por base; pero antes de publicar nuestro trabajo general * nos era preciso venir á pulirle y completarle á Paris, lo que hemos egecutado, y solo despues de nuevos estudios lo hemos presentado á la Academia de ciencias el 7 de noviembre de 1825. Lo mismo que Cuvier, Lamarck, de Ferussac y M. de Blain- ville, consideramos todavía á las especies microscópicas como Cephalopodes; pero lejos de mezclarlas, á ejemplo de estos autores, con las otras conchas multilocu- lares, formamos un órden del todo separado con el nombre de Foraminiferas, por oposicion а el де S¿foniferas, donde colocamos á todos los grandes Cephalopodes, estableciendo desde luego una línea de demarcacion bien trazada entre estas dos secciones del todo distintas. Ademas hemos dividido las Foraminiferas en cinco grandes familias, á las que sirve de base el modo de crecer de las conchas hasta en- tonces desconocido: las Sichostegas para las celdillas apiladas sobre una sola línea, las Enalostegas para las celdillas alternas, las Helicostegas para las celdi- llas espirales, las 4gathistegas para las celdillas apelotonadas al rededor de un eje y las Entomostegas para las celdillas divididas en compartimentos en su interior. Hemos circunscrito los géneros conocidos segun sus verdaderos caracteres zoológicos, 1 Familles naturelles da Regne animal. encuentra de nuevo en casa del autor, calle de Luis-le-Grande > Esta coleccion, que vamos а aumentar con una entrega п° 5, en Paris. destinada á los géneros descubiertos despues de su primera 3 Impreso en enero de 1826 еп los Annales des sciences publicacion у á las conchas caracteristicas de los terrenos, se naturelles. INTROD. И 18 FORAMINIFERAS. suprimido las numerosas duplicaciones y los géneros apócrifos de Montfort, despues establecido muchos géneros nuevos para las nuevas formas; todo cimentado en el estudio de mas de seiscientas especies, cuyos dibujos han sido sometidos á la Aca- demia. Desde aquel momento hemos establecido sobre bases sólidas las verdaderas relaciones con las otras conchas multiloculares de estos cuerpecitos, tan variados en sus formas, y dado los elementos de su estudio; solo segun las ideas admitidas todavía, mui persuadidos, lo mismo que MM. Cuvier, Lamarck , Blainville y de Ferussac, que debian ser Cephalopodes, dudando siempre de lo que notábamos en las especies mui pequeñas de las costas del Oceano hemos desconocido entonces las verdaderas formas de los animales. M. de Ferussac para tener ocasion de recordar sus propios trabajos, nos habia rogado con mucha instancia que le dejásemos presentar el nuestro á la Acade- mia de ciencias; este sabio le hizo preceder de una introduccion crítica sobre los métodos establecidos antes de nosotros para la elasificacion de los Cephalopodes, introduccion en la que adopta por entero nuestras miras. La Academia habiendo tenido а bien nombrar de su seno una comision para que la diese cuenta de nuestro trabajo, MM. Latreille y Geoffroy Saint-Hilaire fueron nombrados, y el 12 de diciembre de 1825 presentaron acerca de su contenido un informe mui favorable’. El mismo año M. de Haan por su parte, estudiando mas especialmente las gran- des conchas polithalamas, habia llegado tambien al resultado importante se separar las conchas microscópicas de las demas Cephalopodes multiloculares con el nombre de Asiphonoidea en oposicion á el de Siphonoidea, reservado para los Nautilos y los Ammonites; no obstante, en su clasificacion nuestras Foraminiferas están colo- cadas entre los Cephalopodes desnudos y sus 3phonoidea, viniendo á interrumpir la serie natural ғ. * M. Latreille se expresa en estos términos: « Leur test, en « général, était censé offrir un siphon, et il existait point « dès lors de ligne de démarcation entre ces divers animaux ; «М. d'Orbigny en a établi une: de lá ces deux distinctions « importantes, Céphalopodes siphoniféres et Céphalopodes « foraminiféres. On п'ауай encore recueilli aucun fait sur la « composition et le mode d'accroissement de leurs coquilles, « La majeure partie des genres ou sous-genres qu'on avait for- « més dans ces divisions ne Pavait été que sur des figures, « encore beaucoup entre elles étaient peu dignes de notre « lames des lieux qu’il habitait, n'avait presque pas eu, en се « genre Qobservations, de successeur. Notre jeune naturaliste « Pa surpassé sous ce rapport, soit en examinant avec plus de « soin les espèces qu’il a répresentées, soit en étendant ses « recherches à une foule de coquilles analogues de tous les « pays, et en en donnant des figures, les unes planes, les autres « en relief, qui ne laissent rien à désirer. Ainsi donc, mes- « sieurs; il a jeté une vive lumière sur Pune des parties les plus « ténébreuses du domaine de la zoologie. Il a débrouillé ce « chaos au moyen de recherches infiniment délicates qui ont « confiance ou devaient même étre rejetées, Ces coupes géné- « riques avaient été multipliées sans discernement, et il règnait « ici la plus grande confusion. Il fallait abattre en grande partie « cet échafaudage, creuser de nouveaux fondemens et recon- « struire: cest ce qu'a fait M. d'Orbigny. Les auteurs systé- « matiques n'avaient mentionné que peu d'espèces, et qui « étaient susceptibles de révision et souvent de réforme, Sol- « dani, qui s'était même borné à Vétude des coquilles polytha- « long-temps exercé sa patience, et au moyen encore del'em- « ploi до? a fait de ses observations pour rectifier et perfec- « tionner sa méthode, de manière qu’à cet égard il Pa pour « ainsi dire сгёёе. Nous devons naturellement conclure que son « travail est du plus haut intérêt, très digne de Papprobation « de PAcadémie, » 2 Monogra] moniteoram el зресітет. INTRODUCCION, 19 Poco tiempo despues M. de Blainville, en los Moluscos de la Fauna francesa, no conserva ninguna de nuestras divisiones, cambia tambien del todo su primera clasificacion de 1825 y no mezcla mas las Foraminiferas con las Siphoniferas, sin separar, no obstante, del todo á las conchas microscópicas de los demas Cepha- lopodes. Esta clase está dividida en cuatro órdenes de igual valor: el primero (Cryptodibranchies) contiene los Cephalopodes sin concha; el segundo (Polyta- lames) contiene los grandes Cephalopodes de concha multilocular; el tercero (Mul tiloculés) abraza una parte de nuestras Stichostegas, de muestras Enalostegas, de nuestras Helicostegas y todas nuestras Agathistegas; el cuarto órden, 105 4rgonau- tulés, comprende una parte de nuestras Helicostegas; el quinto, en fin (Celulés), reune una parte de nuestras Entomostegas con las Peneroplis, cuyas celdillas no están divididas en lo interior. M. de Blainville habiendo visto á el animal de las Miliolas, anuncia que carece de apéndices, que está encerrado en las primeras cel- dillas, de las que sale en parte y se acerca á los Moluscos aceres y á las Planarias; pero este sabio no aplica estos caracteres y estas aproximaciones mas que á las Miliolas. En 1827 M. de Ferussac' publicó, sin saberlo nosotros, con el título de adic- ciones y de correcciones á muestros trabajos de 1825, pretendidas rectificaciones de sinonimia que estamos lejos de adoptar, considerando á las figuras que cita como demasiado inciertas para darlas entrada en nuestro sistema; por lo demas no ha cambiado nada en nuestra clasificacion. Dos años despues, Cuvier en la segunda edicion de su Reino animal* remite á nuestro cuadro para las Foraminiferas, que él coloca con los Cephalopodes bajo el nombre de Camerínes, separándolas como nosotros de las otras conchas multilo- culares; desde entonces Cuvier adoptó nuestras divisiones, que su limitado cuadro le impidió desenvolver. En la misma época M. Rang, en su Manual’, siguió sin restricciones nuestra clasificacion, sin mudar en nada nuestras secciones, conside- rando las Foraminiferas como Cephalopodes. M. Ficher ‹ hizo otro tanto hablando de algunas especies fosiles de la Rusia. En cuanto á M. Deshayes no sabremos decir con que objeto en 1830 en el artí- culo Cephalopodes de la Enciclopedia* y en los artículos especiales de esta obra emprendió cambiar todo lo que habiamos hecho: ¿seria solo para hallar un pretexto de criticar nuestras secciones, á las que mira como viciosas, como poco naturales, como defectuosas, atacando igualmente á los géneros de los cuales al- 1 Bulletin universel des sciences et de industrie, encro, 4 Bulletin de la Société impériale dzs Naturalistes de Mos- 1827. con, 1829, p. 329. * Tomo Ш, р, 22. 5 Página 224 y siguientes. > Manuel de Phistoire naturelle des Mollusques, р. 97. 20 FORAMINIFERAS. gunos le parecen dudosos' porque no los conoce y otros mal establecidos porque los confunde con formas distintas”? Pero teniendo que presentar aquí la historia de las Foraminiferas у no responder á un ataque publicado durante nuestra perma- . nencia en America, ataque que no podiamos refutar en el acto, поз limitaremos á decir que sentimos que M. Deshayes no haya comprendido mejor los modelos de nuestros géneros que le hemos dado y que no haya abandonado por un instante las formas conchiológicas de Moluscos, á las que está acostumbrado; tal vez enton- ces no habiese procurado desbaratar en un solo dia el fruto de seis años de estudio sobre unos seres diferentes de lo que se conocia, y acerca de los cuales hoi dia, des- pues de diez y nueve años de investigaciones , no creemos deba alterarse nada en las grandes divisiones que primitivamente establecimos y que han sido general- mente adoptadas en Europa, mientras que su clasificacion no ha sido seguida. M. Deshayes empieza por cambiar nuestras Foraminiferas en Polypodes, los que divide en ocho familias: la primera, las Enlomostegas, que toma de nosotros; la segunda, las Vautiliformes , para una parte de nuestras Helicostegas nautiloi- des; la tercera, las Trochiformes, para algunas de nuestras Helicostegas turbi- noides; la cuarta, las Dimorphes , para algunos géneros eterogeneos de nuestras Helicostegas y Stichostegas; la quinta, las 4gathistegas, segun nosotros; la sexta, las Enalostegas, en las que están confundidos, con el nombre dado рог nosotros, géneros de enroscamiento espiral y de celdillas alternas; la sétima, las Globulinas, para cuerpos que no nos parece deben pertenecer á la misma clase de seres; la oc- tava, las Sichostegas, comprendiendo solamente parte de nuestros géneros de esta familia. En resúmen, M. Deshayes no habiendo tomado como nosotros el modo de crecer de las conchas por término de su clasificacion, ha partido de otro principio que le ha llevado á un método cuyas bases, lo confesamos, en vano he- mos procurado comprender. El mismo año M. Menke en su sistema * general de Moluscos cambió el nombre general de Foraminiferas en el de Trematophora; pero en lo demas este sabio adoptó sin restriccion todas nuestras divisiones. Llegamos en fin á una época en que las Foraminiferas, consideradas bajo un nuevo punto de vista, están separadas enteramente de los Moluscos. Habiamos re- conocido en el curso de nuestro viaje á América que estos animales no debian ser parte de los Cephalopodes; pero á nuestra vuelta cargados de inmensos materiales nuevos sobre toda la zoología, no podiamos publicarlo todo á la vez y hemos sido * El género DENDRITINA (р. 231); los subgéneros de las Nodosarias. ? El género FRONDICULARIA que confunde con un género distinto que hemos llamado FLabeLLINA (р. 228 y artículo Frondiculaire, ete., etc.) è Synopsis méthodica molluscorum, р. 4. INTRODUCCION. 21 ganados por M. Dujardin. Este hábil observador, al que la ciencia debe muchos hechos nuevos, leyó el 23 de enero de 1835 : á la Sociedad de ciencias naturales una memoria sobre los animales de los géneros Miliola, Vorticiala, Rotalia, Truncatulina, Cristelaria y Melonia’, memoria en la que anuncia que la testa no es interior, que el animal absolutamente privado de órganos de locomocion y respiracion se compone de una serie de artículos ó lóbulos que van aumentándose y envolviéndose sucesivamente, compuestos de materia animal globulosa, como la materia verde de las Zygíma ; concluye que estos seres no pueden referirse ni á los Moluscos ni á alguna de las clases actualmente establecidas, y en consecuencia les da el nombre де Symplectomeres, cambiando así el de Foraminiferas que ha- bianos impuesto. Poco tiempo despues, de Ferussac’, á quien habiamos dicho а la vuelta de nuestro viaje á principios de 1834 que nuestras observaciones nos habian hecho reconocer positivamente nuestro error primitivo relativamente á los animales de las Foraminiferas impropiamente colocados como Cephalopodes, no desistió por eso de considerarlos como tales, y sin comunicárnoslo imprimió en las generalida- des sobre los Moluscos de la obra que formábamos en comun sobre los Cepha- lopodes criptodibranchios la historia de las Foraminiferas como tercer órden de los Cephalopodes : da una rápida ojeada á una parte solamente de los autores que han hablado de ellas; pero se engaña , conforme ya hemos dado а conocer, diciendo que Linneo en su duodécima edicion cita á Gronovius, Martini, Murray, Favane, Schraeder, Boys у Walker; todos estos autores son posteriores á Linneo. Cita en seguida los trabajos de Soldani, de Fichtel y Moll, de Montfort, de Montagu , de Lamarck, y llega en fin а nosotros y á M. Dujardin. Desarrolla nuestro método, el que adopta todavía, pero estableciendo algunas dudas acerca de las Foramini- feras consideradas como debiendo formar una sola serie, se inclina á creer que las unas tienen la concha interna y las otras la tienen externa. El mismo año M. Dujardin, habiendo hecho nuevas observaciones, escribió al Instituto el 22 de junio * para anunciar que habia reconocido (en contrario á su asercion del mes de enero) 1° que los animales de las Foraminiferas tienen fila- mentos tentaculares que se extienden prolongándose, cuando se ramifican, а una distancia igual á cinco veces el diámetro de la concha y llegan entonces á una grande delgadez; 2 que estos filamentos tienen un movimiento lento de reptacion, por medio del cual el animal se adelanta, M. Dujardin no puede verlos como * Bulletin de la Société des sciences naturelles de France, siendo todas ellas fosiles б de las regiones cálidas de los mares. ne 3. Ann. Sc. nal. (1835), 2: serie, t. Ш, p. 108. з Aperçu historique sur les Céphalopodes, p. 81. * M.Dujardín se ha equivocado aqui en el género : ninguna 4 Le Temps, 24 de junio. L'Echo du Monde savant, 26 especie de Melonia (Alveolina) viva existe en nuestras costas, dejunio, Ann, Sc. nal., t. Ш (2: serie), р. 312. INTROD, үт 22 FORAMINIFERAS. verdaderos tentáculos; su substancia animal primaria, que se extiende y brota en cierto modo como las raices, se hace con mucha lentitud para que admita tal consecuencia : concluye, como en su memoria precedente, que estos animales deben formar una clase aparte, no los conserva ya la denominacion de Symplectomeres y propone el llamarlos Rhizopodes. Dando cuenta de esta última memoria, de Ferussac ' pregunta si los filamentos vistos por М. Dujardin no serian los mismos tentáculos que habiamos señalado en 1825, y cree que su autor se ha apresurado mucho á erijir en clase una serie ani- mal de la que solo conoce algunas especies. M. de Blainville en un informe, que desgraciadamente no hemos visto y que solo conocemos por el extracto que han dado los periódicos», presentó á la Academia de ciencias la historia de las Fora- miniferas, y al paso que encontró mui interesantes las observaciones de М. Dujar- din, cree tambien que el autor se apresuró mucho á establecer una nueva clase. En fin del mismo año M. Dujardin è en una importante memoria sobre el or- ganismo inferior desenvuelve los hechos enunciados en su carta del 2 de junio: comienza por señalar las relaciones de las Foraminiferas, á las que llama todavía Rhizopodes, con los infusorios llamados Proteos ó Amibos, despues describe su género Gromia (formado de Foraminiferas de concha cartilaginosa), que él toma por tipo de la clase, habla de las Miliolas (sin duda nuestras Triloculinas) pero no habiendo hecho un estudio especial de los géneros ni de las especies, se equi- voca diciendo que las Cristelarias sacan filamentos por los poros de la última cel- dilla. Sin duda es de una Peneroplis de la que quiere hablar, porque las Criste- larias no tienen mas que una abertura, y se equivoca tambien relativamente á las Vorticialas y á las Melonias; sin embargo, estos errores no rebajan nada al mérito intrínseco de sus observaciones, que solo será preciso aplicar а Otros géneros. M. Dujardin cree que los filamentos pueden soldarse y confundirse por anastomo- sis, y que dos filamentos que se encuentran en el mismo plano se reunen alterna- tivamente para no formar mas que uno solo pasado el punto de juntura. Para agotar nuestro asunto no falta mas que citar la memoria de M. Roemer * sobre las Foraminiferas de los terrenos terciarios del norte de Alemania; este sabio considerando á las Foraminiferas todavía como Cephalopodes, conserva todas nuestras secciones sin introducir la menor mudanza. En resúmen encontramos en la historia de las Foraminiferas cuatro épocas bien distintas, en las que ha variado el modo de considerarlas. 1° Miradas como curiosidades microscópicas por los primeros autores que han ha- * Magasin de zoologie (Bulletin zoologigue), 1835, з Annales des sciences naturelles, t. IV, 2* serie, р. 343. р. 104. 4 Nenes Jahrbuch fur min. geog., de MM. Léonard y з Réformateur, 1835, n° 292, martes 28 de julio. Brown, 1828, p. 381. INTRODUCCION. 23 blado de ellas, se vieron análogas vivas de los Ammonites y delos Nautilos y fueron descritas como tales. Linneo las reunió todas en su gran género Nautilus, con todas las conchas multiloculares, y esta clasificacion fué seguida por todos los autores clásicos hasta fin del siglo diez y ocho y aun por algunos hasta 1824 (Martins). 2 Esta reunion monstruosa de todas las conchas de separaciones en un solo género, no podia sostenerse en el momento en que las ciencias naturales tomaban un vuelo tan rápido; así es que Lamarck en 1804 no titubeó en separarlas y en crear géneros distintos, siempre dejándolas mezcladas con las mismas familias que los Nautilos en las Cephalopodes polithalamas, ejemplo seguido por MM. Defrance, de Blainville , Cuvier, Ferussac y Latreille. 3° La tercera época es aquella en que mediante mas profundas observaciones he- mos reconocido que no solo las conchitas no debian estar reunidas en las mismas familias que los grandes Cephalopodes, sino que debian tambien estar completa- mente separadas y formar una serie distinta, á la que impusimos el nombre de Fo- raminiferas, adoptado por MM. Ferussac, Rang, Fischer, Roemer y otros mu- chos autores; pero cambiado en Tremathophoras por M. Menke, en Polypodes por M. Deshayes, en Simplectomeres y Rizopodes por M. Dujardin. 4° La cuarta y última resolucion es la que se verificó eu 1825, cuando M. Dujar- din publicó el primero observaciones sobre los animales de estas conchas; observa- ciones que, como ya habiamos reconocido por nuestra parte, obligan á separarlas no solo del órden de los Cephalopodes, sino tambien de la clase de los Moluscos, para destinarlas á las clases inferiores de la animalizacion, en las que creemos que deben permanecer de hoi en adelante. Despues de haber dado á conocer la historia de las Foraminiferas y las discusio- nes científicas de que han sido objeto, vamos segun nuestros conocimientos, cimen- tados en una larga serie de observaciones, á describir los caracteres generales y sus relaciones con todo el conjunto de la zoología. н CLASE DE LAS FORAMINIFERAS. Las Foraminiferas son animales microscópicos , no agregados, de existencia individual, siempre dis- tinta, compuestos de un cuerpo formado de una masa coloreada, de consistencia glutinosa, entero y entonces redondeado ó dividido en segmentos, éstos colocados en una línea sencilla б alterna, en- roscados en espiral ó apelotonados al rededor de un eje; este cuerpo está contenido en una concha cretacea, rara vez cartilaginosa, modelada sobre los segmentos del animal y siguiendo todas las mo- dificaciones de formas y enroscamiento. De la extremidad del último segmento de unas б de muchas aberturas de la concha ó de los poros de su contorno parten filamentos contractiles, incoloros, mui prolongados, mas б menos delgados, divididos y ramificados, que sirven á la reptacion. Si pasamos revista á los diferentes caracteres que acabamos de trazar, veremos 24 FORAMINIFERAS. en primer lugar que aun teniendo todos una existencia individual distinta y bien separada todos no son libres, y que los hai en este número que están siempre fijos (las Truncatulina, Planorbulina, etc.) modelándose sobre los cuerpos donde han empezado á vivir. El cuerpo (nombre que nos vemos precisados á poner á la masa vital) de una tinta mui variable, mas siempre idéntica en todos los individuos de una misma especie, es amarilla, bermeja, roja, encarnada, violeta ó azulada; su consistencia es igualmente variable, segun las especies, y parece componerse de una multitud de globulitos cuya totalidad determina la tintura general; está contenido en una cu- bierta membranosa, entera ó no, colocada al rededor de cada segmento. Hemos dicho que el cuespo estaba algunas veces entero, sin segmentos: en efecto, se le ve así en los géneros GROMIA y ORBULINA que representan el estado embrionario de todos los demas, conforme vamos á tratar de probarlo : crecen, sin duda, por toda la circunferencia. Cuando el cuerpo está dividido por lóbulos ó segmentos, el primero, parecido al estado constante de las Groma, es al principio redondo ú oval, prolongado, segun los géneros; pero una vez formado no se aumenta, se cu- bre de materia cretacea y representa mas ó menos una bola sobre la cual se aplica otra mayor, otra tercera mayor todavía y así sucesivamente mientras que dura la existencia del animal. Los segmentos cubiertos de una testa, lejos de estar siempre uniformemente cubiertos entre sí, unos соп relacion á otros, están por el contra- rio aglomerados ó contorneados de diversas maneras , sin que puedan estarlo mas irregularmente, y siguiendo en su colocacion leyes casi matemáticas. En efecto (en los unos): 1° Los segmentos están en una sola línea recta ó arqueada, aumentando desde los primeros á los últimos. 2° En otros, colocados unos á la extremidad de los otros, vienen á enroscarse oblicuamente, formando una espira turriculada ó contorneándose sobre un mismo plano y representando una voluta regular. 3° Otras veces no enroscándose crecen alternativamente å derecha é izquierda del primero y sucesivamente por cada lado del eje longitudinal ficticio, encabestrándose. 4° Algunos géneros nos representan una complicacion de los dos últimos modos de que acabamos de hablar, es decir, que formados de segmentos alternos su con- junto se епгоѕса en espiral, sea en el mismo plano, sea oblicuamente. 5° En fin, estos segmentos se apelotonan al rededor de un eje, y lateralmente á la longitud, en dos, en tres, en cuatro б en cinco caras opuestas, volviendo des- pues de cada revolucion completa á colocarse exactamente los unos sobre los otros. Los segmentos al crecer el cuerpo se aglomeran de seis maneras distintas: éstas modificaciones son las que determinan la de la concha que tomaremos por base INTRODUCCION. 25 de nuestra clasificacion; pero antes de hablar de la concha terminemos lo concer- niente á los animales, ocupándonos de los filamentos. Los filamentos, semejantes en cuanto á su forma en todas las Foraminiferas que hemos visto, están formados de una materia incolor, transparente como el cristal, y se prolongan hasta cinco ó seis veces el diámetro del cuerpo. Mas ó me- nos numerosos se dividen en su longitud en ramillos que volviéndose á subdividir vienen á representar una rama '. Estas ramificaciones son las que se adhieren á los diferentes cuerpos con bastante fuerza para arrastrar en pos de sí la concha, y la hacen avanzar en las especies libres. Si los filamentos son semejantes en cuanto á sus formas, varian de diámetro y sobre todo de posicion. En todas las Agathis- tegas, una parte de las Enalostegas, algunas Helicostegas, las Gromía y sin duda muchas Stichostegas, forman un hacecillo que sale por una abertura única y en- tra por el mismo punto en la contraccion; en las Peneroplis y las Polystomellas los filamentos se proyectan solo por cada una de las aberturitas de la parte superior de la última celdilla. En las Rosalinas, las Globigerinas, las Globulinas, las Trun- catulinas y las Planorbulinas, los filamentos salen algunas veces tambien por una abertura y ademas por cada uno de los numerosos poros que acribillan estas últi- mas celdillas y sirven para sostener el animal. En resúmen, estos filamentos reemplazando en las Foraminiferas las mismas funciones que los numerosos ten- táculos de las Asterias, sirven para fijar el animal y son para él, como ya hemos dicho, medios poderosos de locomocion. En cuanto á las modificaciones que aca- bamos de indicar, estamos lejos de querer darlas una gran importancia, porque con forma idéntica vemos conchas perforadas en toda su superficie y otras que no lo están, teniendo por lo demas unas y otras la abertura de la última cel- dilla absolutamente semejante; así este caracter solo será secundario para nosotros. A lo que precede se limita hasta ahora cuanto sabemos de los animales de las Foraminiferas, puesto que la observacion no nos ha hecho mas que á M. Dujar- din reconocer en ellas órganos de nutricion y reproduccion; en este particular se está todavía en hipótesis. Si en los géneros provistos de una abertura que deja sa- lir á los filamentos es permitido suponer que el alimento puede ser absorvido por los intervalos de éstos, no sucede lo mismo en los géneros cuya última celdilla está á veces cerrada y cuyos filamentos salen por los poros pequeños. Pudiérase creer entonces que estos mismos filamentos sirven para tomar el alimento, porque de otro modo seria preciso preguntarse por donde estos animales se lo procuraban. Tenemos por lo menos la certidumbre por los tubitos que se forman en cada poro 1 No hemos visto una anastomosis completa de los ramillos, ces, pero sin fundirse entre si; se les sigue aunque con tra- сото lo indica M. Dujardin ; se pegan, es verdad, mucha ve- bajo y se les ve separarse de nuevo. INTROD. үп 26 FORAMINIFERAS. de ciertas especies, que los filamentos pueden depositar materias calizas: ellos son tambien los que encostran despues de la formacion de las celdillas la testa por de- fuera de un modo tan notable como lo encontramos en muchas Foraminiferas. Veamos ahora lo que nos ofrece la concha: su contextura es variable, y esta va- riacion concuerda casi siempre con las divisiones de formas © de enroscamiento de los segmentos del animal; en efecto, cuando los segmentos están apelotonados la concha es opaca, de una contextura compacta como la porcelana y sin ningun in- dicio de porosidad exterior. En los segmentos alternos cuya concha es equilátera, lo mismo que en todos aquellos cuyo enroscamiento espiral es oblicuo, la concha es porosa, taladrada particularmente en las últimas celdillas de un gran número de agujeritos que se obliteran á medida que el animal no los necesita y están al- gunas veces proyectados en tubo. Cuando los segmentos están en una sola línea recta , cuando se enroscan en espiral sobre el mismo plano ó que están alternados (la concha inequilátera), su contextura es casi siempre transparente, compacta y parecida al cristal. Hai sin duda excepciones en cada division; pero la mayoría sigue las reglas que acabamos de dar. El color generalmente es uniforme en las conchas que son blancas б amarillen- tas: las que tienen las celdillas apelotonadas son casi todas blancas como la leche; las otras tienen la transpariencia del cristal, y de aquí los diferentes grados de opacidad hasta el blanco mate son la tinta mas comun. No encontramos excepcio- nes mas que en algunas especies de las Rotalínas, de las Rosalinas, de las Pla- norbulinas , de las Globigerinas у de algunos otros géneros en los que las tintas son amarillas, rojizas ó violadas, siempre análogas á lo que hemos dicho de la co- loracion del animal, y entonces estas tintas son tanto mas vivas cuanto están dis- tantes de la última celdilla ó se acercan á la primera. Las conchas en general son libres; sin embargo, hai excepciones en las cuales estas conchas fijas en un punto determinado se amoldan y toman su forma. Este caracter no es mas que secundario, pues que estos mismos animales fijos como lo están no parece que sufren cuando se les desprende y se les coloca en otra parte, como ya hemos experimentado: así no lo indicamos mas que como un hecho útil de saber. Hemos visto á todos los animales compuestos de un cuerpo de la misma materia de filamentos idénticos: el cuerpo por la colocacion regular de sus segmentos nos ofrece por sí solo un buen caracter para las secciones primordiales. Hemos dicho tambien que la concha se modela sobre todas las modificaciones de formas y de enroscamiento de los segmentos del animal, al que proteje y envuelve, que es una parte tanto mas importante cuanto que reproduce por entero todos los caracteres. Desde entonces esta colocacion de los segmentos ó el modo de crecer de las celdillas INTRODUCCION. 27 de la concha, que no es mas que la reproduccion , será la base de nuestra clasifica- cion, en cuanto representa la reunion íntima de los caracteres zoológicos del animal y de la concha. Este modo de clasificacion es tanto mas necesario cuanto que permitirá estudiar y comprender, sin ver los animales, no solo las especies que cubren actualmente todas las costas marítimas del mundo, sino tambien todas las especies tan nume- rosas que componen una parte de las capas de la corteza terrestre. Segun esta exposicion , he aquí como dividimos á las Foraminiferas. Cuando no hai mas que una sola celdilla cartilaginosa ó cretacea en todas las edades , es nuestro primer órden, las MONOSTEGAS. Cuando las celdillas están apiladas ó sobrepuestas una tras de otra en un solo eje recto ó arqueado, sin espiral, es nuestro órden segundo, las STICHOSTEGAS. Cuando las celdillas, apiladas ó sobrepuestas en un solo eje, forman una voluta espiral, es nuestro tercer órden, las HELICOSTEGAS. Cuando las celdillas son alternas en dos ejes y que el conjunto se enrosca en espiral, sea en el mismo plano, sea oblicuamente, es nuestro cuarto órden, las ENTOMOSTEGAS. Cuando las celdillas están reunidas por alternativa en dos ó tres ejes distintos, sin forma espiral, es muestro órden quinto, las ENALOSTEGAS. En fin, cuando las celdillas están apelotonadas en muchas caras sobre un eje comun formando cada una la mitad de la circunferencia, es nuestro órden sexto, las AGATHISTEGAS. Estando fundadas nuestras primeras secciones en el modo de crecer y en la co- locacion de las celdillas ó segmentos del animal, nuestras divisiones secundarias deben fundarse lógicamente en modificaciones de menor importancia, refirién- dose todavía á estas formas primordiales ; así fundamos tambien nuestras familias en esta misma serie de caracteres, segun que en la composicion de la totalidad están modificadas las partes en términos de ser pares ó no serlo. Se sabe, por ejem- plo, que una concha enroscada en el mismo plano será regular por cada lado y equilátera, mientras que una concha enroscada oblicuamente será siempre inequi- látera. Citamos este hecho para mostrar que el caracter de partes pares no carece de importancia zoológica. En cuanto á las secciones de menos valor, las que deben constituir los géneros, las hemos determinado segun la combinacion del modo de crecer unido al número, á la forma y al sitio de las aberturas de la última celdilla. El cuadro siguiente dará una idea exacta de la total clasificacion de las Forami- niferas, segun nuestro modo de ver, hallándose los caracteres de las secejones me- nos importantes en los cuadros parciales de cada órden. FORAMINIFERAS. PRIMER ORDEN MONOSTEGAS. Concha compuesta de una sola celdilla. SEGUNDO ORDEN. STICHOSTEGAS. Celdillas apiladas ó sobrepuestas una en pos de la otra en un solo eje recto © ar- queado: nada de es- piral. TERCER ORDEN: HELICOSTEGAS. Celdillas apiladas ó sobrepuestas sobre un solo eje formando una voluta espiral. CLASIFICACION GENERAL DE LAS FORAMINIFERAS. A: oncha li g Е fija, irregular, inequilátera........ / 74 f ү: PRIMERA SECCION Una sola abertura. GROMIA. OOLINA. ORBULINA. NoposarIa. FRONDICULARIA. LrxGULINA. RIMOLINA. VAGINULINA. MArGINULINA. CITHARINA !. CONULINA. PRIMERA FAMILIA EQUILATERALIDA. Concha libre, regular, equilátera. SEGUNDA SECCION \ Muchas aberturas. | Pavona. | : SEGUNDA FAMILIA INEQUILATERALI DÆ. WEBBINA. CRISTELLARIA. FLABELLINA. PRIMERA FAMILIA PE анавы №оммолха. OpERCULINA. VERTEBRALINA. Hauentxa?. PoLYSTOMELLA. PENEROPLIS. ORBICULINA. ÁLVEOLINA. RoTALINA. GLOBIGERINA. PLANORBULINA. TRUNCATULINA. ANOMALINA. ROSALINA. VALVULINA. VERNEUILINA. BULINA. NAUTILOIDÆ. Una sola abertura. Concha equilátera; espira enroscada en el mismo plano. EREA, ARAN Muchas PEROS SEGUNDA FAMILIA. PRIMERA SECCION. na sola aber- TURBINOIDÆ., U ber: tura. edades. A A Concha inequiláte- ra; espira enroscada SEGUNDA SECCION. oblicuamente. La misma forma en todas CHuRYSALIDINA. FAUJASINA. еа GAUDRYINA. и Cambiando de forma. A AAA а 1 Habiendo sido descubiertos los géneros siguientes despues de la descripcion de las especialidades, creemos que se deben indicar aquí los, caracteres á fin de completar el conjunto de nuestras divisiones. Género Crrmarina. Concha libre, regular, equilátera, prolongada ó triangular, sumamente comprimida, recta ó arqueada» Celdillas estrechas sobrepuestas sin cubrirse, siem- pre mui oblicuas y creciendo desde la primera, varias veces INTRODUCCIÓN. PRIMERA FAMILIA CUARTO ORDEN. SEGUNDA FAMILIA. CASSIDULINIDE. PRIMERA FAMILIA. ENTOMOSTEGAS. pd POLYMORPHINIDA. sx Concha de lados de- ENALOSTEGAS. semejantes sin partes pares. Celdillas reunidas SEGUNDA FAMILIA. por alternativa en dos 0 tres ejes distintos TEXTULARIDA. ó sin forma espiral. Concha de lados se- mejantes, todas las \ partes pares. PRIMERA FAMILIA. = MILIOLIDA. Concha equilátera de partes pares. SEXTO ORDEN: AGATHISTEGAS Celdillas apelotona- SEGUNDA FAMILIA. das en un eje comun cada una componien- do la mitad de la cir- cunferencia. MULTILOCULIDA. Concha inequilátera sin partes pares. FORAMINIFERAS. STERIGERINIDE. св | | | ÉS: ASTERIGERINA. ÁMPHISTE: Herreros А. EGINA. CASSIDULINA. DmorPHINa. Altar nativa de las celdillas en tres caras. ) GUTTULINA. Alternativa de las PoLYMORPHINA. celdillas en dos caras. | VincuLiva. Cambiando de forma. | BIGENERIMA. GEMMULINA. 2 Bs Una sola a- үй ell = 5 bertura. дусу Е 5 SAGRINA. Ss Muchas CUNEOLINA 2 aberturas. д. ө Una sola celdilla ПЕНА aparente. Ж, Celdillas apeloto- | BrLocuLIxa. nadas en dos caras } FABULARIA. opuestas. SPIROLOCULINA. TRILOCULINA. CRUCILOCULINA. ARTICULINA. Celdillas apeloto- nadas en tres caras opuestas. Celdillas apelotona- Sa сш cuatro Caras { SPHAROIDINA. Сайа» apeloto- A га сіпсо сагаѕ opues QUINQUELOCULINA. ADELOSINA. ЗА A A A A A ече = globulosas; la última truncada por encima. Abertura redonda, marginal, situada en el ángulo DELES, n° 113, 5° livraison.) Relaciones y diferencias. Por el apilamiento de las celdillas sobre un eje recto y sin cubrimiento, por el sitio de la аһег- saliente de la concha, (Mo- tura, las Citharinas se aproximan á las Vaginulinas; по obs- tante, se distinguen con facilidad por sus celdillas mas oblicuas, mas estrechas, por la gran compresion general de la conchas y por la abertura simplemente taladrada y no situada en un leve hueco de la última celdilla; la analogia de la forma de las es- pecies con una arpa nos ha hecho llamarlas Citharinas. Todas las especies que conocemos son del Lias, de la Calcarea de po- lipos de Caen, en la formacion jurasica y del gres verde en las capas inferiores del sistema cretaceo. э Género Hauenixa, d'Orb.Concha libre, mui comprimida, equilátera, suborbicular, de contextura compacta y sin aguje- ros. Espira casi envolviente. Celdillas en corto número por vueltas, en forma de escamas; la última convexa. Abertura en hendidura longitudinal а la compresion de la concha, situada contra la vuelta de la espira y adornada de un cerquillo п" 114, grueso, radiado. Monk 5° livraison.) INTROD. Relaciones y diferencias. Este género por su contextura ораса se acerca å las Vertebralinas, de las que difiere por la forma de su abertura; se aproxima tambien por el sitio de su abertura á las Operenlinas y Nonioninas, aunque distin- guiéndose de las primeras por los cerquillos y la forma de esta abertura, y de las segundas por su abertura longitudinal y no transversal á la compresion de la concha; difiere tambien de los géneros ya citados, por sus celdillas comprimidas y por la convexidad de la última. Nos ha comunicado la especie tipo M. Joseph de Hauer, presidente del consejo áulico de Viena; ha sido encontrada en el fondo de un pozo artesiano barrenado en la misma Viena. Debemos ademas á la complacencia infi- nita de М. de Hauer, el conocimiento de mas de cien especies de las cercanias de Viena, de Buitur (Transilvania), de Kalem- berg, de Nussdorf, ete., y gracias å las minuciosas investiga- ciones de este celoso naturalista conocemos ahora las relaciones que existen entre las Forominiferas del Austria y las de otras capas tercia : nos consideramos dichosos por manifestarle aquí nuestro vivo en el quenos todos los amigos de lá ciencia. үш 28 FORAMINIFERAS. Las secciones primordiales que acabamos de dar comparativamente, están ci- mentadas en caracteres positivos hasta tal punto que nunca hai indecision al clasificar las especies en cada uno de ellos. No obstante, aunque sean lejanas hemos encontrado transiciones entre todos los órdenes. Estas transiciones no establecen una línea continua de uno á otro, ó los eslabones de una sola cadena, sino rela- ciones del mismo valor con todos; así no podemos indicarlas mas que en forma de radiacion, como se verá en nuestras consideraciones especiales de cada órden. Estas relaciones dependen mas bien del cambio en el modo de crecer de algunas conchas en cierta edad que del modo primitivo. Será demostrado lo que precede por un hecho singular, del que debemos ocu- parnos aquí puesto que es general: queremos hablar de la tendencia constante á las transacciones de lo compuesto á lo simple que hemos observado en el creci- miento de las Foraminiferas. Las conchas de los dos órdenes primeros están ya de- masiado sencillamente compuestas para que puedan manifestarnos esta tendencia; son por el contrario sus formas las que toman las otras cuando cambian el modo de crecer. En efecto, las Cristellaria, las Spirolina, en las Helicostegas, despues de haberse enroscado en espiral sobre el mismo plano, cesan de pronto de contor- nearse y sus celdillas se proyectan como las Stichostegas en línea recta en el sentido del enroscamiento; las Clavulina, en el mismo órden, despues de haberse enros- cado en espiral oblicua se proyectan en celdillas sobre una línea, en el sentido del eje de la espira. Observamos el mismo hecho en los otros órdenes: las Dimorphina, las Bigenerina y las Gemmulina, en las Enalostegas, nos ofrecen el mismo cambio que aun volvemos á encontrar en las 4rticulina, en las Agathistegas; así cada uno de los géneros que acabamos de citar, despues de haber empezado por un modo de crecer complicado, propio de su órden, cambia en cierta edad simplificándole y to- mando el de las Stichostegas. Un solo género, el de las Gaudryina, presenta un cambio diferente, pero aun de lo compuesto á lo simple; despues de haberse en- roscado en espiral prolongada, sus celdillas se hacen solo alternas y continuan de este modo mientras crecen. La reunion de estos hechos no deja dudar que la ten- dencia general en el crecimiento de las conchas de las Foraminiferas no sea de lo compuesto á lo simple y no de lo simple á lo compuesto; observacion que no deja de ser interesante en las consideraciones generales de la zoología, puesto que vemos precisamente lo contrario en casi todos los animales elevados en la escala de los seres. Segun lo que precede acerca de los caracteres de los animales y de las conchas, es fácil convencerse por comparacion que las Foraminiferas no podrian colocarse en ninguna de las clases conocidas de la zoología. Mucho menos complicadas que las Echinodermes, que los Polipos y aun muchos Infusorios en cuanto á su organiza- cion interna, tienen una parte del modo de locomocion de los primeros por sus INTRODUCCION. 29 filamentos; están mas avanzadas en la escala que los segundos por su existencia aislada, по agregada y libre, teniendo al mismo tiempo muchas relaciones de com- posicion orgánica con los últimos, en las cuales, sin embargo, nunca se ve una regularidad tan grande en la cubierta cretacea y en la colocacion de las partes. Esta rápida ojeada, que nuestro plan no nos permite extender mas, nos induce á creer que las Foraminiferas deben formar una clase distinta en la escala de los seres; pero cual sea el puesto que deban ocupar es lo que nos falta determinar. La existencia aislada é individual de las Foraminiferas, la libertad de que gozan, su modo de locomocion, son caracteres que merecen ser considerados. Aunque me- nos complicadas en su organizacion interior que muchos Polipos, no tienen una vida comun, agregada; una multitud no se reune para formar un cuerpo regular como ellos; caminan, lo que no hacen éstos. Sus medios de locomocion son com- plicados, y la gran regularidad de su cubierta cretacea las coloca como mui supe- riores á los Polipos. Por otra parte, menos completas en su organizacion interior y exterior que los Echinodermes, les son bien inferiores bajo todos aspectos; así creemos por la presente que por la radiacion de sus filamentos el sitio de las Fo- raminiferas es en el grupo de los animales radiados de Cuvier б Actinozoaires de M. Blainville, entre la clase de los Echinodermes y la де los Polipos , como clase del todo independiente. Para dar una idea general de la distribucion geográfica de las especies de Fora- miniferas actualmente vivas y de las que han existido anteriores á nuestra época, cuyos despojos fosiles se encuentran, vamos á dirijir una rápida ojeada á la tota- lidad de las que hemos observado; las consideraremos solo por órden, debiendo ocuparnos en las especialidades de las secciones de menos valor. Comencemos por las especies fosiles: mo hemos encontrado vestigio alguno en los terrenos de transicion. Las primeras que hemos visto pertenecen á la época oolítica б jurasica y son poco numerosas, concretándose todas á los únicos órde- denes de las Stichostegas y de las Helicostegas, y en el último solo á la familia de las Nautiloideas : por tanto son conchas de formas regulares, equiláteras, en un solo apilamiento de celdillas rectas ó espirales y por consiguiente de las mas senci- llas en su composicion : se las encuentra en cada una de las capas de esta formacion, desde las arcillas del Lzas hasta las capas portlandianas. Así que se llega á las primeras capas de la formacion cretacea © yesosa se em- pieza á ver especies diferentes y formas del todo distintas. En el terreno neoco- miense se encuentran ya Enalostegas; en el gres verde se encuentran Stichostegas, Helicostegas (Nautiloideas y Turbinoideas) y Enalostegas; pero sin hallar todavía especie ninguna de las Agathistegas ni de las Entomostegas. Toda la creta inferior ó mediana ofrece sin excepcion la misma composicion de formas de las Foramini- 30 FORAMINIFERAS. feras; pero así que se pasa а los terrenos сгеіасеоѕ superiores, los géneros se hacen mas numerosos , lo mismo que las especies, y se encuentran ya muchas formas que han sobrevivido hasta nuestros dias; sin embargo, las Entomostegas no se manifiestan mas que en las capas mas superiores (de Maestricht) y las Agathiste- gas faltan sin excepcion. Subiendo а la formacion terciaria, las Agatbistegas aparecen en abundancia por la primera vez con un número mucho mayor de especies y de géneros que to- dos los otros órdenes, presentando todas las modificaciones que se hallan vivas, sin que por esto ofrezcan las mismas especies análogas, fuera de las capas mas su- periores. Si quisieramos aventurar aquí un juicio sobre los terrenoe terciarios en general, diriamos que segun nuestras observaciones se pueden distinguir dos épo- cas en las Foraminiferas : los terrenos mas inferiores como los de Paris, de Dax, de Burdeos, de la Turena, del Austria y de Italia que parecen haber pertenecido á regiones cálidas, y los del crag de Suffolk y de Bélgica que nos muestran mas particularmente especies de las regiones frias. Entre las Foraminiferas que viven actualmente en el seno de los mares hallamos casi todos los géneros que existian en los terrenos terciarios, pero con mucha ma- yor multiplicidad de especies. Los órdenes de las Helicostegas, de las Enalostegas y de las Agathistegas, están repartidos en todos los mares y por todas las latitudes; solamente son menos numerosas en las regiones frias que en las templadas y cáli- das. No sucede lo mismo en las Stichostegas y las Entomostegas: el primer órden, mas comun en el Adriático que en ninguna otra parte, no se encuentra mas que en mui corto número en los mares cálidos y falta del todo en la Oceanía y en la mayor parte del grande Oceano. Lo contrario se verifica en las Entomostegas pro- pias, particularmente en las islas de las regiones cálidas de los dos grandes Ocea- nos, mientras que apenas se encuentran algunas especies en las regiones templadas РА у que уа no se ve ninguna en los mares frios. Resulta de estas observaciones que las especies de Foraminiferas primero mui sencillas en sus formas, han empezado á presentarse en corto número con los ter- renos oolíticos, que se han hecho mas complicadas en su composicion y mas nu- merosas en la formacion cretacea; que se han diversificado mas todavía y se han multiplicado en una proporcion mui rápida en la formacion terciaria, y que hoi dia son mas numerosas y mas variadas en géneros y especies en las regiones cálidas y templadas que en las regiones frias. Ahora si queremos probar con números la verdad de lo que acabamos de asegu- rar, la demostraremos en los dos cuadros siguientes de las especies fosiles y vivas que conocemos hasta el dia, habiéndolas dividido segun los lugares y los órdenes á fin de que se pueda formar mejor idea de todo el conjunto. CUADRO INDICATIVO DEL NUMERO DE ESPECIES FOSILES DE FORAMINIFERAS, SEGUN LA ANTIGUEDAD DE LOS TERRENOS Y LOCALIDADES, NUMERO DE ESPECIES FOSILES POR ORDENES. TERRENOS TOTAL { д | Немсоѕтеваѕ. | 2 ES А Y ES y e SAS S ES 2 DELAS Е 2 BE | 2 LOCALIDADES. © Nauti- | Тивы- 3 8 CE las 3 Е z E LOIDE. | NOIDÆ. Е E | E TERRENOS OOLÍTICOS. | | Lias. — St-Maixent (Deux-S: 3 2 » Dale, » 5 uchan (Aude)... » 1 » AA „Ж 1 Calcareo de Polipos de Caen. ороо ` 4 3 Й SUP ы ы 7 Coralrag.— La Rochelle (Charente- | | Inféricure)...... » 1 » A ыд 1 Tonnerre (Үоппе)..... » 1 2 A (ср 1. Olítico del Ain....... ЖОООК » 2 » IO ааа 2 Ч A Tí 10 | » ENGINES 17 TERRENOS CRETACEOS. | | | Neocomienses.— Vendeuvre (Aude).| >” Ире: > RATA 1 Gres verde.— Angulema (Сһагеме) > » 1 j 6 нн» 1 El Mens (Sarthe)...... 4 lie ү, Late 9 Creta de Caprinas (Charente-Inf."°). 1 51 Э, зо 16 Creta media. — Saintes. . . . . р, > 2, # á 2 Creta de Nummulinas. — St. Martory (Наше-багоппе)............. 9 2 2 » 1 > 3 Creta de Nummulinas. — Royan an 2 ap A ЫШ: 8 ах. 2 “| > » зь | » » Creta blanca de Paris............] 20 9 21 x 4 В, 54 Creta de Polipos. —Tours........ > 1 4 Э poz 9 Chavagne..... 4 3 А Р E | Я и endome. . z 2 + SS 6 Valogne. . 1 E 2 lla 33 Maestricht ... 4 7 22 | 1 и к, 45 Тотлі de los terrenos cretaceos.| 32 55 18 1 A > 207 TERRENOS TERCIARIOS. Inferiores. — Soissons, Montolieux. . > 8 1 » > >» 9 Couiza (Aude) ...... » 3 3 » 2 5 13 ШШШ уу 3 14 25 » 12 23 ке Burdeos y DA 5 18 20 2 8 17 70 Falun de la Turena........ » 3 3 › 2 » 8 Grag de Sulfolk....... 2 5 5 » 18 | 8 38 de Bélgica...... » 3 5 > КО: 8 Superiores. — De Austria 6 12 5 5 еы 32 do апа ‚|| 26 34 17 » 16 9 102 Estanque de Memo. * 1 1 Б 4 » 6 Toraz de los terrenos terciarios. | 42 101 85 rA 65 | 63 363 TOTAL GENERAL. .... 81 166 163 8 106 | 63 587 | INTROD. CUADRO INDICATIVO DE LAS ESPECIES VIVAS DE FORAMINIFERAS, SEGUN LAS REGIONES Y LAS LOCALIDADES. NUMERO DE LAS ESPECIES POR ORDENES. d N A кылы. E REGIONES Г е а АО E У “4 | MuLicostEGAS. | $ 4 E vo h 4 © 5 < < = |m Е) E Е = E | 2 5 2 LOCALIDADES. 3 2 Maur | Tue E El 2 o = е = E = LOIDE. | морж. | E 2 a = 2 || | E ы = E REGIONES CÁLIDAS. | Isla de Cuba y Antillas 1 ч. 19 33 å 5 39 118 Islas Canarias 2 1 5 үү, 19 » 1 10 48 Madagascar » 1 | 10 14 2 6 12 45 Isla de Borbon. > Ыр ЖИ, 6 1 2 3 91 Isla, de Francia > о 5 1 1 » 7 » 5 5 15 1 2 18 46 » » т 16 » 3 16 42 » » 6 3 1 2 7 19 5 » » 3 12 1 » 7 23 Santa Elena . » » 1 6 ә » 8 17 Islas Mariana: » » 2 1 1 » » 4 Islas Sandwich. » » 4 3 3 5 15 30 Isla de Rawack. » зБ 4 2 1 9 21 Islas Galápagos. e » » 1.3 4 » » Д 14 California y Méjico - + > » 6 9 » 9 12 36 oo » RE 2 » » 2 5 | | Torax de regiones cálidas. 2 18 | 88 | 452 19 47 (165 [491 REGIONES TEMPLADAS. | | | | Mar Adriático ..... 5 1 458 | 95 39 » 19 11 [| 140 Mediterraneo........ 1 2 | 2 19 » 8 35 89 Oceano costas de Franci o » Е zi » 1 5 18 Саро de Buena Esperanza...... » > 4 5 » » 3 12 Patagonia septentrional ...... » » | кө ES 1 1 Б 17 Jackson, Nueva Molanda. » » | 3 3 » » » 6 Montrey (California)... » » 4 > » 4 2 10 Valparaiso (Chile). . » » 1 > 1 » 2 4 Nueva Zelanda... » » > » > » 2 2 ToraL de regiones templadas.| 2 49 69 78 2 33 65 | 298 REGIONES FRIAS. Terra Nova y ss 3 3 ж 5 ә 8 Islandia... » SS 2 » » 6 FE Patagonia п meridional. 5 SA 9 2 3 8 28 Kamtschatk: A SH Es т | ч > 1 ES д 1 UASB ЦИ 5 he > | š 2 N E 2 A Torax de las regiones frias. » 2 | 10 15 3 3 18 52 TOTAL GENERAL.. .... 4 69 | 167 | 246 24 83 |248 | ви INTRODUCCION. 31 Se ve por los cuadros precedentes que las proporciones numéricas de las Fora- miniferas que conocemos, aunque no sean definitivas, puesto que estamos mui distantes de haber examinado todos los terrenos y de conocer todas las localidades, pueden á lo menos en cuanto á lo presente dar una idea comparativa de las pro- porciones de cada época y del aumento progresivo del número de especies desde la primera aparicion de las Foraminiferas hasta nuestros dias: los terrenos oolíticos nos han ofrecido solo diez y siete especies, mientras que los terrenos сгеіасеоѕ nos muestran ya doscientas siete, ó catorce veces mas; pero esta cantidad aumenta mucho si la comparamos á las especies de los terrenos terciarios, en los que ya hemos encontrado el número de trescientas sesenta y tres especies. Aun nos resta confrontar el número de las especi vivas, que sube á ochocientas cuarenta y una, casi el doble de las especies fosiles. Así resultará de estas sumas que cono- cemos hoi dia ochocientas cuarenta y una especies vivas y quinientas ochenta y siete fosiles , ó el total de mil cuatrocientas veinte y ocho, número que comparado al que conociamos de Foraminiferas en 1825 (600 especies), muestra evidente- mente que ahora tenemos mas que el doble de este número”. Hemos dicho que conociamos ciento diez y ocho especies de Foraminiferas de la isla de Cuba. Así están repartidas por órdenes y por familias. MONO A edi o Молл PEE EN I жиги й И ос сасон оосо оов В IO ARAGON т Моо MELICOSTEGAS. +... зе 52 Токвіхот. ENTOMOSTEGAS. AÁMPHISTEGINID. 4 4 0 тоо As 8 ENALOSTEGAS o... .0.o...... $ 15 | REE IRT л К и ны. 7 ( MILIOLIDA. .... AOS Caco и 6) АСАТНІЅТЕСАЅ..... OEE 39 lirio doy е Бабр 96) О 5 118 Si comparamos la totalidad de las especies con las que conocemos de otros mares no encontraremos analogía completa con ningun parage; solamente como era de * Ademas de las especies de Cuba descritas en esta obra, publicamos en este momento otras tres faunas locales: 1° la de las Canarias, en la obrade MM. Webb y Berthelot, Historia natural de las islas Canarias; 9° la de la América meridional, en nuestro Viaje á la América meridional (una parte especial); 3° fauna de la creta blanca del depósito de Paris, en las Me- morias de la Sociedad geológica de Francia. 32 FORAMINIFERAS. —INTRODUCCION. esperar, las Foraminiferas de las Antillas, sin ser idénticas, tienen relacion por la serie de los géneros con lo que conocemos de las islas de corales en la Oceanía. Este conjunto comparado а las diferentes faunas de Foraminiferas fosiles de los depó- sitos terciarios , se aproxima mas particularmente por la composicion de los géne- ros y por las formas á las especies de los terrenos austriacos de Buitur, de Nussdorff y de Kalemberg. Ahora, si antes de pasar á las especialidades averiguamos cuales son las especies de Cuba que se hallan tambien en otras costas, mo hallaremos mas que cinco acerca de las cuales no tenemos la menor duda; éstas son la ORBICULINA universa, que se encuentra al mismo tiempo en el Adriático, en el Mediterraneo, en las Ca- narias y en la India; la OrBICULINA compressa, comun en las islas Осеапіаѕ; la Rosana valvulata, de las Canarias; la PLANORBULINA vulgaris, esparcida en el Mediterraneo y las Canarias, y en fin la NonioNINA Gradeloupi, que tenemos tambien fosil de las cercanías de Dax en los terrenos terciarios. No es realmente posible obtener indicacion alguna de este corto número esparramado en diferentes lugares, mientras que mas de ciento son propias de Cuba y de las Antillas, siendo características de esta fauna local. FORAMINIFERAS. PARTE DESCRIPTIVA. ORDEN 1°. MONOSTEGAS ('). Caracreres. Concha compuesta de una sola cavidad cretacea ó mem- branacca. Compónese este órden de las conchas mas simples, puesto que en todas sus edades solo ofrecen una cavidad esférica, hueca y horadada por una abertura, representando desde entonces la edad embrional de las conchas mas complicadas, cuyo caracter las distingue claramente. Se concibe que la misma simplicidad de este cuerpo permite pocas modificaciones; así es que solo conocemos hasta el dia dos géneros : las Gromia y las ORBULINA, distinguidos únicamente por la contextura cartilaginosa ó membranosa del primero, cretacea y perforada en el segundo. No estableceremos los caracteres distintivos de este órden con los órdenes siguientes, parecién- donos suficiente lo que acabamos de decir para distinguir bien el primero, puesto que le for- man animales que en el estado perfecto representan la primera edad de todos los otros. La especie testacea se encuentra viva simultáneamente en cuasi todas las partes del mundo, y fosil en los terrenos terciarios de Italia. 1 Voz formada de рд, solo, único, y de ахёи, риф. 34 FORAMINIFER 4 GÉNERO 1°. GROMIA. — (Dujardin.) Concha exterior, membranosa, libre, regular, esférica, escavada dentro, provista de un cuello mui corto. Los filamentos salen por el cuello y sirven de pies : lo interior de la concha está lleno de una sustancia glutinosa. Este género, establecido por Dujardin ', para una sola especie de nuestras costas, difiere de las Оввшлхлз en que la cubierta exterior es membranosa en lugar de ser cretacea como en todas las otras Foraminiferas. ORBUL A. — (dOrbigny.) Concha libre, regular, esférica, globulosa, escavada dentro, horadada por todas partes por un gran número de agujeros visibles solo por medio de un grande aumento. Abertura pequeña, re- dondeada, colocada sobre un punto de la circunferencia. Relaciones y diferencias. Las Orbulinas que se aproximan á las Скома de M. Dujardin, no es- tando como este género compuestas mas que de una sola cavidad, se distinguen sin embargo en que esta cavidad en lugar de ser membranosa é íntegra, está calada de un gran número de agu- jerillos. Observaciones. Sería posible que en ciertas circunstancias el animal pudiese cerrar la abertura de la concha; al menos ésta no es siempre visible y no está abiert а mas que como en la sexta parte de los individuos mui frescos. Hemos titubeado mucho tiempo antes de colocar este singular cuer- pecito entre las Foraminiferas ; tampoco lo hemos citado en nuestro cuadro metódico aunque ya le conociamos; pero desde que M. Dujardin ha observado su Gromia nos ha quedado tanta menor duda sobre este particular, que las Globigerinas nos ofrecen esferitas semejantes formando su es- pira. Esta concha tiene por otra parte la contextura de la testa de este último género; solamente no se compone mas que de una sola cavidad y permanece en estado perfecto bajo las mismas condiciones de forma que encontraremos por base de los diferentes modos de cr vemos en las otras. Es probable que el animal puede sacar un hacecillo de filamentos, no solo por la abertura de la concha sino tambien por las muchas aberturitas de su superficie. "ecimiento que Habitacion. Encontramos la misma especie en el Adriático, costas de Canarias, en las Antillas y en la India, sin hallar diferencias específicas, lo que puede mui bien consistir en la simplicidad de su forma susceptible de pocas modificaciones. que se encuentra fosil en los terrenos terciarios de las cercanías de Sienna, en Italia. en el Mediterraneo, en las Creemos Y Annales des sciences naturelles, t. IV, р. 343, FORAMINIFERAS. 35 N° 1. ORBULINA UNIVERSA. — (d'Orb.) DEL UE E ORBULNA. Testa bullata, sphærica, tenui, irregulariter, minutissime perfo- rata; apertura circulari. A КУО: Н А Concha globulosa, esférica, regular, mui delgada, bastante rugosa, cubierta por todas partes de agujeritos. 4bertura redonda. Color blanco amarillento. Habitacion. Esta conchita es mui comun en Rimini, en las orillas del Adriático, la hemos en- contrado en la arena de las costas del reino de Argel, que debemos á la complacencia de M. Berard; la hemos encontrado igualmente en Tenerife; habita tambien, aunque mas rara- mente, en la arena de Cuba (comunicada por el Sr. de la Sagra) y en la de la Jamaica, Santo Tomas, Guadalupe y de la Martinica (traida por M. Fernando Candé) : tambien la tenemos de los mares de la India. Ж ч ARA f = = A мре ‚Жз УИ: САТУ АЙ ay М | ЧИЙ, A КО ойуу кр) 203 aid den КД шн ашаа ум) „й бен оу е! Soano dl risa dah reli: г ` Tos rara d A A e сори ЕТА ай шуу rs 5 e de # уйлен O A A Ў С Ко nal ela dl аьа нач ое o Г йз ў ти А Eb nada i Ы a гв ау 4 і І i п * “ е = E П сезе й п КЫ ан 4 ` . ORDEN 2°. STICHOSTEGAS (). — d'Orb.) CaracTERES. Cavidades apiladas ó sobrepuestas extremo á extremo sobre un solo eje derecho ó arqueado, sea que pasen de los bordes ó no al cubrirse; nada de espiral. El modo que tienen de crecer las conchas de este órden es de lo mas sencillo. El principio de todos sus géneros se forma de una bolita oval ó deprimida, taladrada por una abertura sobre la que vienen sucesivamente á apilarse una despues de otra cavidades mas ó menos numerosas, siempre en el sentido del eje longitudinal, sea en una linea recta como en las Nodosarias, Orto- ceras y Glandulinas, sea en una línea curva como en las Dentalinas y Marginulinas; así el creci- miento solo se verifica en el sentido longitudinal, y siempre por cavidades semejantes colocadas unas sobre otras sin que del conjunto resulte espiral. La misma sencillez de este modo de crecer debia hacer suponer pocas modificaciones de formas y caracteres ; sin embargo son mui variables, lo que nos determina á subdividirlas en géneros y subgéneros. Unas están siempre libres y desde luego tienen formas regulares, pares, equiláteras; tales son nuestros ocho primeros géneros, al paso que otras, nuestras Wessina, están fijas y no solo no tienen lados iguales de partes pares, sino que representan con relacion á las otras como la mitad longitudinal de una concha. Este caracter servirá de base á la primera seccion de los gé- neros. Cada cavidad está traspasada por una ó muchas aberturas que se reproducen sucesivamente en cada una y sirven de comunicacion de unas á otras. La mayor parte de los géneros no tienen mas que una abertura, como las Noposartas, las LixcuLiwas, las RimuLivas, las VacrwuLixas, las MarcruuLixas, las FRONDICULARIAS; Otras por el contrario tienen muchas, como las ConuLixas y las Pavonmas; éste será nuestro caracter secundario : despues nos quedarán como caracteres ge- néricos la combinacion del sitio y forma de estas aberturas con la del ajuste de estas cavidades. Cuando la abertura central es redonda, la concha prolongada, cónica, se reconocen nuestras No- DOSARIAS ; la concha mui deprimida, flabeliforme, nuestras FroxbicuLartas ; la abertura transver- 1 De dzino, hilera, serie, y de еген, piso. 38 FORAMINIFERAS. sal, prolongada, en hendidura y central, nuestras LincuLinas. Cuando la abertura es lateral, en hendidura, son nuestras RiwuLInas ; lateral y sin salida, con concha casi derecha, nuestras VAGINU= uvas; marginal con prolongacion y la concha encorvada en cayado, nuestras MarcIvuLINas. Cuan- do hai muchas aberturas en línea recta sobre una concha comprimida, son nuestras PAVONINAS; muchas aberturas esparcidas, concha cónica, son nuestras CONULINAS. Para dar mejor á conocer estas divisiones, vamos á agruparlas comparativamente en el cua- dro siguiente : . STICHOSTEGAS. Géxrnos / | Abertura redonda, concha cónica ó cilin- drica.... NODOSARIA + | бубе Siamo ШОШ. concha comprimida flabeliforme . .... +. FRONDICULARIA. Abertura en hendi- 1* SECCION. Ji \ dura transversal. .... LINGULINA. PRIMERA: тазы. / ps Una sola abertura. Й / Abertura en hendi- dura longitudinal... RIMULINA. EQUILATERAILIDA. Concha libre, regular, e й р Sin prolongacion, equilateral. А а Abertura marginal.< concha derecha. .... VAGINULINA. Con prolongacion , concha en forma de cayado posterior. .... MARGINULINA. П Aberturas esparcidas, concha cónica.. . . CONULINA + 2° SECCION. Ў Abertura en una sola línea, concha com- | Muchas aberturas. | -ig Я \ primida, Паре огте, . . PAVONINA. | \ srousm Fonna INEQUILATERALIDÆ. Concha fija, irregular, inequilateral.. -seese eette PEE T, BARINAS De la innumerable cantidad de especies de estas conchitas, todas las que conocemos pueden co- locarse claramente en los géneros que acabamos de señalar. Estos géneros, puramente arbitrarios y deducidos solo de la forma de la concha puesto que todos estos animales nos son desconocidos, nos parecen sin embargo naturales cuando consideramos que ademas de la analogía constante en el modo de crecer de todos ellos la misma naturaleza de la concha parece demostrar que deben ser agrupados juntos, teniendo casi todos una contextura vitrea, transparente, idéntica, y ademas un aire notable de familia. Su modo de crecer, diferente al de los otros órdenes, los separa claramente; по obstante vemos una cadena continua entre algunos de los géneros que los р y las Stichost no por su modo primitivo de crecer sino en la edad adulta; por ejemplo: 10 Nuestras ВісемеміхА y Dimonpmiya despues de haber sido formadas de cavidades alternas se terminan por cavidades sobrepuestas como en todas las edades de las conchas de este órden, es- tableciendo desde luego el paso á las Enalostegas. FORAMINIFERAS. 39 20 Las CLavuLixa, en las Turbinoideas, que despues de haberse compuesto de гау!айев iori a espira oblicua y turbinada, se terminan por cavidades apiladas, como en las оо Я las Espona, entre las Nautiloideas, que despues de haberse contorneado en espiral a м е enroscada sobre un solo plano, se prolongan en seguida para formar una sucesion de e ades simples sobre una sola línea como en Jas Noposarta ó mejor en las MarcINuLINA, teniendo ya una tendencia á la espiral, nos ofrecen un paso bien marcado á las Helicostegas, | f f 30 En fin, las ArTicuLINa, despues de haber sido verdaderas Triloculina, sus cavidades Исав de haberse apelotonado en tres caras еп su juventud concluyen por prolongarse en cavidades api- ladas unas sobre otras, pasando evidentemente bajo este aspecto а las Agatistegas. нея Los pasos con la edad adulta de los géneros de cada órden que acabamos de citar estab a relaciones de conjunto entre todos ; desde entonces no pueden presentarse en continuacion, y solo señalar estos pasos como múltiplos. Pudieran representarse de este modo: mando un: SYICHOSTE= GAS» Paso å las AGATISTEGAS por las ÅRTICULINA. Las Stichostegas en su estado de vida no están repartidas igualmente en todos los mares. Si las consideramos siguiendo las divisiones genéricas, veremos con arreglo á nuestros actuales co- nocimientos que las Noposarta pertenecen al Mediterraneo y sobre todo al Adriático, á la costa occidental de Africa, á las Canarias, á las Antillas y á los mares de la India, y faltan á lo menos hasta la presente en las costas meridionales de América; veremos á las FRONDICULARIA propias del Adriático ; las LrxcuLa en las Canarias y en las Antillas ; las RumuLma especiales del Adriá- tico; las ManciwuLixa que solo se encuentran en el Adriático y en las Canarias ; las ConuLrxa en las Antillas solamente; las Pavoxiva en Madagascar, y las Wessrna en las Canarias. Resulta que los géneros están bajo este punto de vista repartidos de un modo regular en la superficie del globo y parecen circunscritos á límites especiales como los Moluscos. Ahora no considerando mas que el conjunto numérico de especies, sin hacer cuenta de los géne- ros, encontramos las dos terceras partes de las especies en el mar Adriático, ya son raras en el Medi- terraneo, y mas todavía en el oceano Atlántico; todavía no las tenemos mas que del emisferio Ъо- real en las Canarias y en las Antillas, mientras que faltan del todo hasta la presente en el cabo de Buena Esperanza y en Patagonia. Se encuentran aun algunos vestigios en la costa oriental de 40 FORAMINIFERAS. Africa, en Madagascar y en la India; pero entonces son de formas diferentes á las que presentan nuestros mares europeos. Las Stichostegas fosiles se encuentran en los dos sistemas terciario y Cretaceo. En el sistema terciario las especies son tanto mas numerosas y los géneros tanto mas variados cuanto las capas son superiores. Encontramos por ejemplo tantas especies en los terrenos suba- peninos de Italia y Austria como en el Adriático, y muchas análogas vivas en los géneros Noposa- RIA, Їлхєшлхл у MarctwuLixa solamente. El terreno terciario de Burdeos nos ha mostrado pocas especies de los géneros Nonosarta, FRONDICULARIA, MarcrxuLiNa; el de Paris solo ha ofrecido Nonosarra en pequeño número, y se encuentran tambien en el crag de los ingleses. En el sistema cretaceo encontramos solamente Noposartas, MARGINULINAS y FroxDIcuLARIAS en todas las capas hasta la arcilla verde; estos géneros son mas abundantes en especies en la greda blanca que en otras partes, sin exceptuar los terrenos terciarios inferiores. La historia de las conchas de este órden es poco extensa. Las pocas especies conocidas antes de Linneo estaban descritas desde 1739, por Plancus !, bajo el nombre de Cornu Hammonis, de Si- liquam-Raphanistri; por Gualtieri?, con el de Orthoceras ; por Ledermuller *, otra vez, con el de Cuerno de Ammon; pero todas han sido reunidas con el nombre de NauriLus, con todas las otras que constan de separaciones, por el reformador de la ciencia *, que reunió así ocho especies, cuyas figuras con el nombre de TusuLus son reproducidas por Martini > y por Soldani *. Este infatigable observador que ha pasado una parte de su vida en estudiar las conchas micros- cópicas, по se ha ocupado mas que de las del Adriático, que ha colocado con el nombre de Pory- мокрні0м, de Orrnocerarium, de Tusunus anulus, de Orrnoceras, de Naurius, indistintamente, sin aplicar estos nombres á formas determinadas, y como no ha dado mas que una figura de cada especie hai incertidumbre á veces sobre la clasificacion de las que ha dado á conocer por sus lámi- nas. Lamarck 7, sin aprovecharse de los trabajos de Soldani, coloca todas las conchas prolongadas que han señalado Linneo y Gmelin en los géneros Noposarta y Orrrocera, distinguiéndolas sola- mente porque las unas son lisas y las otras estriadas; coloca entonces indistintamente nuestros géneros Nonosarta, Vaciwurixa, Marcora, los únicos que le son conocidos, en estas dos sec- ciones pert á los Cephalopodes, donde los colocan igualmente Cuvier y M. de Blainville. En 1825 *, considerando á ejemplo de estos sabios las Foraminiferas como Cephalopodes, las he- mos separado sin embargo de todas las demas con el nonibre de Foraminiferas estableciendo Casi los géneros que preceden; hoi dia solo creemos enviar despues de un maduro exámen las Pranu- LARIA á las Helicostegas, y añadimos 4 este órden los géneros Сохшлхл y Webbrxa que hemos descubierto despues. Antes de 1825, época de nuestro primer trabajo, no se habia hecho mencion mas que de una quincena de especies; entonces hicimos subir este número á ochenta, y en el dia conocemos mas de ciento y diez. Tenemos en Cuba solamente, siete especies de este órden, así repartidas por familias, por géne- ros y subgéneros. 1 Ariminensis de Conchis minus notis, t. 1, fol, 5, 6, T. © Conchilien cabinet, Vig., t. I, p. 1, 1769. * Indez Testarum conchylioram , género Orthoceras, * Saggio orithog., 1180 y Testaceografia ac zooplyte, t. XIX, 1742. 1787 á 1789. 3 Amusemens microscopiques, t. ХШ, 1764. ` Animaux sans vertèbres, 1822, t. ҮП, p. 592 * Linneo, Syst. nat., ей. 12, 1767, n° 281 á 289. * Tableau méthodique des Céphalopodes. FORAMINIFERAS. 41 \ М№ОроЅАВІА.......... ERA: { NODOSARIA + ° | 5 ОктноскаїнА......... ф EQUILATERALIDA ........ тў ооо р RE 1 1 (CE oseodrrnandondación Perdona 1 О, 7 7 La comparacion de este cuadro con el de la página 38 prueba que faltan hasta la presente en Cuba, en las Stichostegas, los géneros FrowbrcuLarta, RimuLina, VAGINULINA, MARGINULINA y PAVONINA. 1° FAMILIA. EQUILATERALIDAE. — (40ro0.) Concha libre, regular, equilateral, derecha б arqueada. 1 SECCION. Una sola abertura. — Abertura central. GÉNERO 1°. NODOSARIA. — (Lamarck.) Navrrmos, Linn., Nonosaria y ORTHOCERA, Lamarck, Rreormacus, Montfort. Concha libre, regular, equilateral, prolongada, oval, cónica ó cilíndrica. Cavidades por lo re- gular globulosas, sobrepuestas sobre un solo eje ficticio, estrecho ó arqueado, variando en su relacion desde el recubrimiento casi completo hasta la separacion por estrechez. Abertura redonda, central. Relaciones y diferencias. Entre las otras Stichostegas de abertura central y redonda, no tene- mos mas que las FroxpicuLanta que se distingan de las Noposarta por sus cavidades comprimidas y su conjunto flabeliforme. Difieren aun de las MARGINULINAS y de las VacinuLivas por su abertura central en lugar de ser lateral. Nosotros las dividimos en cuatro subgéneros. 42 FORAMINIFERAS. Т SUBGÉNERO. GLANDULINA. — (d'Orb.) Concha libre, regular, ovoidea, globulosa. Cavidades globulosas, cubriéndose casi enteramente á medida que crece la concha, sin dejar entre sí la menor estrechez ; la última siempre convexa y prolongada; eje central y derecho, abertura redondeada, pequeña, situada en la extremidad de una prolongacion de la parte superior de la última cavidad. Esta division, de la que una especie está representada por Soldani, no habia sido notada ni citada por ningun zoólogo. No tenemos todavía mas que cuatro especies de este subgénero, dos del mar Adriático; una de ellas, la Graxpurixa lævigata, d'Orb., se encuentra aun fosil en los terrenos terciarios de las cer- canías de Sienna, en Italia; la tercera es de la India, y la cuarta fosil nos ha sido comunicada de Kalemberg (Austria) por el Señor Consejero de Hauer. Hemos representado la segunda ( Mo- pites, п? 51, 8° livraison). NODOSARIA. Nautius, Linn., Nobosarta y OrtHoceRA, Lamarck, RreopmaGus, Mont. Concha libre, regular, prolongada, derecha, redondeada ó deprimida, cónica ó cilíndrica. Ca- vidades globulosas, distintas, no cubriéndose mas que en una parte pequeña de su superficie, y de- jando entre sí una profunda estrechez ; la última siempre convexa, muchas veces prolongada; eje ficticio, derecho. Abertura redondeada, pequeña, colocada en la extremidad de una prolongacion de la última cavidad. (Monézes, по 1, 17° livraison, y по 52, 3° livraison +.) Relaciones y diferencias. Este subgénero se distingue claramente del precedente en que sus cavi- dades en lugar de cubrirse casi del todo están por el contrario mui separadas y presentan mas ó menos en su totalidad la apariencia de perlas ensartadas unas tras de otras, mientras que en las Glandulinas el conjunto es ovoide. En este subgénero es donde vienen á colocarse algunas de las especies conocidas, colocadas por Linneo entre los Naurius, y por Lamarck en sus NoDosARIAs y Октноскклз. Hasta la presente tenemos mas de cuarenta especies de esta division, de las cuales las especies vivas son mas numerosas en el Adriático que otra parte alguna. Las tenemos de las Canarias y de las Antillas; así parecen no estar distribuidas igualmente en la superficie del globo. Aunque no poseemos ninguna todavía del emisferio austral, las especies fosiles se encuentran en gran número en los terrenos terciarios de Italia y Austria, y por lo menos se cuentan doce solo de las cerc: a- 1 Reunimos а las Nodosarias nuestro subgénero Mucrontxa, establecido en nuestro cuadro de 1825 FORAMINIFERAS. 43 nías de Sienna. El depósito terciario de la Gironda nos ha ofrecido tres; el de Paris solo una, y el crag de Inglaterra una. Comunes en las capas superiores hemos encontrado tambien muchas hasta en las capas mas inferiores de la formacion cretacea. Tenemos cuatro especies en Cuba y en las Antillas. 1* SECCION. Especies no estriadas longitudinalmente. № 2. NODOSARIA RUGOSA. — (d'Orb.) LAM. 1, FIG. 2 y 3. Nonosaria. Testa elongata, conica, recta, alba; loculis quinis globosis, rotundatis, rugoso-asperis, disjunciis; apertura stellata, prominula. ‚ 6 puntos. 1 millim. Concha prolongada, un poco cónica, derecha, mui obtusa en sus extremidades. Cavidades en nú- mero de cinco en las adultas, todas globulosas, esféricas, mui rugosas ó cubiertas de asperidades irregulares; siendo profundamente espaciadas están solo en contacto por una pequeña parte de su superficie; la primera es ya gruesa redondeada, despues por grados hasta la última que no tiene prolongacion sensible en su extremidad. 4bertura no saliente formando una estrellita ir- regular. Color blanco uniforme. Esta especie tiene por sus rugosidades algunas relaciones de semejanza con nuestra №ороѕАктА hirsuta; pero se distingue por sus asperidades menos pronunciadas, sus cavidades mucho me- nos estrechadas, por la falta de prolongacion superior en la última cavidad y por su abertura en estrella. Rara vez hemos encontrado esta concha en las arenas de Cuba, comunicadas por el Sr. de la Sagra; las hemos descubierto aunque mas pequeñas en la arena de la Jamaica, traida por M. de Candé. 44 FORAMINIFERAS. No 3. NODOSARIA PUNCTATA. — (d'Orb.) LAM. 1, FIG. 4 y 5. Noposaria. Testa elongata, subarcuata, alba; loculis octonis globosis, ro- tundatis, cequalibus, punctatis, minime distinctis; apertura rotundata , sub- elevata. Dimensiones... ахал, ЖЕЛСЕ 62а О A А 1 millim. Concha mui prolongada, igual en su longitud, lijeramente flexuosa, mui obtusa en sus extremi- dades. Cavídades en número de diez en los adultos, esféricas, lijeramente punteadas ó moteadas, todas de igual grosor, cubriéndose en una pequeña superficie, de modo que presentan estrecheces mui lijeras entre cada una. 4bertura pequeña, redondeada, situada en la extremidad de una salida mui pequeña. Esta especie por su superficie punteada se aproxima un poco á la precedente, al paso que se distingue por sus cavidades iguales y su forma prolongada casi cilíndrica, mientras que la otra es cónica y mas rugosa. Hemos encontrado esta especie en la arena de Cuba y en la de la Jamaica, aunque siempre mui rara. 2: SECCION. Especies estriadas longitudinalmente. N° 4. NODOSARIA CANDEL. — (d'Orb.) LAM. 1, FIG. 6 y 7. ODOSARIA. Testa elongata, recta, alba, antice prolongata, postice acumi- nata; loculis trinis pyriformibus, incequalibus, longitudinaliter striatis; aper- tura rotundata. Юйтепзїопез.................. A А у, millim. Concha prolongada, derecha, casi igual en su longitud. Cavidades, tres en los adultos, globulo- sas, piriformes , finamente estriadas á la larga, las estrias un poco ondulosas y bien marcadas solamente en las dos últimas : estas cavidades se cubren en su extremidad y dejan entre sí una es- trechez; la primera es mas ancha que larga, acuminada en su base, las demas son mas largas que FORAMINIFERAS. 45 anchas. Abertura pequeña, redondeada, colocada en la extremidad de una prolongacion rugosa mui larga de la última cavidad. Color blanco. A la especie á que se aproxima mas la Nonosarta Candei es la N. gibba fosil de las cercanías de Burdeos; pero se distingue por mayor prol i idades, por estrias que reemplazan á los laditos salientes y cortantes y por su prolongacion anterior rugosa en vez de ser lisa. Es mui rara en Cuba y la Jamaica ; la hemos dedicado á M. Fernando de Candé, oficial de marina, celoso por la historia natural y al que debemos las arenas de muchas Antillas, en las que hemos encontrado nuestras especies de Foraminiferas. en las N° 5. NODOSARIA CATESBYI. — ( d'Orb.) LAM. Т, FIG. 8, 9 y 10. Noposarta. Testa brevi, recta, alba, antice elongata, postice acuminata; loculis binis pyriformibus, inceequalibus, longitudinaliter costatis; costis trede- cim acutis, distinctis; apertura elongata , radiata. Dimensiones. ....,., cas о 13 de millim. Concha oblonga, derecha, ensanchada en su base. Cavidades dos (al menos nunca hemos visto mas) globolosas, piriformes, fuertemente separadas, marcadas con doce ó trece lados salientes, longitudinales, prolongándose hasta la abertura; la primera mas ancha que larga, acuminada por detras, la última mas larga que ancha y prolongada en tubo. 4bertura pequeña, colocada en la ex- tremidad de la prolongacion anterior y marcada de radios correspondientes á los lados. Color blanco uniforme. Esta linda conchita se parece á nuestras Noposamia pulchella y N. oblonga, distinguiéndose de una y otra por sus lados mas espaciados, teniendo ademas muchas relaciones exteriores , sobre todo con la segunda especie. La creemos sin embargo mui diferente porque todos los individuos nos han mostrado el mismo caracter. La cavidad inferior es siempre mas ancha en la Nonosarta Catesbyi que en esta especie. 3" SUBGÉNERO. DENTALINA. — (d'Orb.) Concha libre, regular, equilateral, prolongada, arqueada, cónica ó deprimida. Cavidades glo- bulosas frecuentemente oblicuas, cubriéndose parcialmente y no dejando muchas estrecheces; la última siempre convexa y muchas veces prolongada : eje ficticio, siempre arqueado ; la convexidad del lado opuesto á la abertura está redondeada, terminal, las mas veces sin prolongacion y puesta un poco de lado. (MopkLes, n° 5, 1** livraison.) 4 46 FORAMINIFERAS. Relaciones y diferencias. Este subgénero se distingue de los dos precedentes por su eje ficticio, arqueado en vez de ser derecho, lo que hace á casi todas las cavidades oblicuas y no regulares, y coloca desde luego la abertura un poco lateralmente, pero siempre en el eje de la encorvadura. Se distingue tambien de las Marginulinas, igualmente arqueadas, en que la convexidad de la en- corvadura está del lado opuesto á la abertura, mientras que en las Margimulinas la convexidad está por el contrario del mismo lado. Es cierto que estas modificaciones tienen poco valor zoológico, pero como para los Helix se han establecido secciones á fin de colocar las diversas formas con el objeto de facilitar su estudio, nosotros creemos deber establecerlas aquí, tanto mas que estos pequeños seres tan poco importan- tes en la apariencia están sin embargo multiplicados hasta punto que amenazan formar por sí solos un mundo inmenso que no se podría distinguir sin secciones artificiales. Se concibe tambien que hai en estos cuerpos mínimos, lo mismo que en las conchas grandes, especies que establecen el paso de una seccion á otra, y por lo mismo difíciles de clasificar. Habian sido confundidas con el nombre de Naurimus por Linneo, y рог Lamarck con el de ORTHOCERA. Conocemos veinte y cuatro especies, y de ellas muchas del Adriático ó fosiles de los terrenos ter- ciarios de Italia, en las cercanías de Sienna. Un gran número de especies se encuentra todavía en el sistema cretaceo hasta en las capas mas inferiores ; nosotros hemos descubierto diez solamente en la arcilla blanca. La isla de Cuba y las demas Antillas no nos han ofrecido ninguna especie. 4° SUBGÉNERO. ORTHOCERIN — (d Orb.) Concha libre, regular, equilateral, cónica. Cavidades no convexas aplicadas unas sobre otras sin cubrimiento ni estrechez; la última casi plana sin prolongacion terminal. 4bortura calada en el centro de la última cavidad. (Véanse los Mopères, n 2, 1" livraison.) Relaciones y diferencias. Se ve que las Orthocerinas teniendo una sola abertura central como las Nodosarias, como las Glandulinas se distinguen lo mismo que de las Dentalinas en que las ca~ vidades ya no son ni convexas ni cubiertas unas por otras, sino que son solamente sobrepuestas, y en que por otra parte la última cavidad en lugar de ser convexa y prolongada hácia abajo es por esta parte enteramente plana y sin ninguna prolongacion por la abertura. Han sido confundidas рог Lamarck con las Orrnocera. No conocemos mas que dos especies de esta division, una fosil de los terrenos terciarios de las cercanías de Paris y otra viva de las Antillas, que es la que describimos. FORAMINIFERAS. 47 ORTHOCERINA CUADRILATERA. — (d'Orb.) LAM. 1, FIG. 11 y 12. ORTHOCERINA. Testa conica, brevi, quadrilatera, subarcuata, luteo-albida, postice obtusa, supra subplana ; loculis numerosis, crescentibus, quadrilateri- bus, irregulariter punctatis; apertura rotunda , minima, centrali. Dimensiones. Longitud бовай. „оо... DRI E кА А de millim. Concha corta, un poco arqueada, mui cónica, creciendo regularmente desde la primera cavidad hasta la última, obtusa por detras, truncada y un poco convexa por encima, provista en toda su longitud de cuatro ángulos salientes pero no cortantes y de una depresion bastante considerable entre cada ángulo. Cavidades doce á trece mui estrechas, transversalmente arqueadas y marca- das de puntos irregulares mas visibles encima de la última ; salen un poco en escalera unas sobre otras. Abertura redonda, pequeña, colocada en medio de la parte superior sin salida ni cerquillo. Color blanco amarillento, la parte superior de la última cavidad mas teñida. Esta singular conchita se distingue de la Orrnocerina clavulus en que es angular en vez de ser redonda y sobre todo mucho mas corta : es en una palabra una forma del todo disonante entre las conchas de este género. Es sumamente rara en Cuba y en la Jamaica en la arena en que la hemos descubierto. GÉNERO 6°. FRONDICULARIA. — (Defrance.) Concha libre, regular, equilateral, oblonga ó romboidal, fuertemente comprimida por cada lado. Cavidades deprimidas representando cada una un semicírculo ó los dos lados de un triángulo cuya extremidad es frecuentemente prolongada, la primera siempre oval y regular ; eje ficticio derecho. Abertura redondeada, única, calada en la extremidad anterior del ángulo formado por cada cavi- dad. ( Monères по 3, 1ге livraison.) Relaciones y diferencias. Esta concha singular, compuesta como los géneros precedentes de cavidades apiladas, se distingue sin embargo en que estas cavidades, fuertemente comprimidas, se cubren en su crecimiento solamente por cada lado del allanamiento dejando en el medio todas las cavidades aplicadas unas con otras. Resulta que en lugar de formar en el todo una línea recta ó arqueada, representan un romboide generalmente regular, una serie de ángulos inversos ó de triángulos apilados y taladrados en su parte anterior, disposicion del todo diferente á la que en- contramos en los otros géneros. 48 FORAMINIFERAS. M. Deshayes ' ha pensado que nos habiamos equivocado al asignar á este género los caracteres precedentes, porque ha encontrado una concha semejante á nuestra FroxbicuLaria rhomboidalis, que comenzaba por una espira regular. Podemos asegurar que todas nuestras Frondicularias em- piezan por un apilamiento sobre una sola línea, y solo M. Deshayes ha confundido con nuestro género el que nosotros llamamos FrabELLINA que comienza efectivamente por un pequeño Nautilo y toma en seguida la forma de las Frondicularias; pero estas FLaBELLINA ademas de que su modo de crecer es diferente del de las Frodicularias, parecen tambien pertenecer а época geológica dife- rente puesto que caracterizan la formacion cretacea. Las Frondicularias que conocemos son vivas ó de los terrenos terciarios de Italia, de las cercanías de Dax y sobre todo de la arcilla blanca de Paris. Conocemos cinco especies de este último sitio. Se encuentran hasta en la greda verde del departamento de la Sarthe. GENERO 7°, LINGULINA. — (d'Orb. Concha libre, regular, equilateral, oblonga ó prolongada, comprimida. Cavidades comprimidas, cubriéndose parcialmente á medida que van creciendo; la última mui convexa sin prolongacion : eje ficticio central derecho. 4bertura terminal, mediana, única, en hendidura transversal sobre la convexidad superior de la última cavidad. Contextura vitrea. (Морѓікѕ, по 26, де livraison.) Relaciones y diferencias. Por su contextura y la forma de sus cavidades un poco en recubri- miento, este género se aproxima á las Nodosarias; pero se distingue fácilmente de todos los sub- géneros de esta division por su forma comprimida, y sobre todo por su abertura prolongada en hendidura transversal en vez de ser redonda, Este género contiene hasta la presente tres especies vivas, de las cuales dos habitan en el mar Adriático. La segunda, la LixcuLma carinata, mui abundante en las islas Canarias, se encuentra todavía en las Antillas, y segun Soldani estaría fosil en los terrenos terciarios de las cercanías de Sienna. № 7. LINGULINA RINATA. — (d'Orb.) LAM. 1, FIG. 13 y 14. Orthoceratia zo0phytica subcordiformia, Soldani, ЇЇ, t. 99, f. м. 4, p. 9. — Orihoceratia pyriformis, Soldani, Saggio, t. IV, t. 12, a A йуз Orthoceralia zoophytica, Soldani, t. ЇЇ, t. 100, fig. P. (jóven). — Lingu- lina carinata, d'Orbigny, 1835, Tabl. méth. des Céphal., p. 91, n* 1. (Mo- DELES, п° 26, 2° livraison.) Lincura. Testa oblongo- elongata, compressa, carinata, nitida, lævigata, 1 Véase el articulo Frondiculaire de PEncyclopédie méthodiqne. FORAMINIFERAS. 49 translucida, antice rotundata , postice cuneata; loculis numerosis, incequali- bus; apertura lineari, transversali. Dimensiones. Болш@............... ARA AA 3 millim. Concha oblonga, prolongada, comprimida lijeramente , carinada en sus lados, sutil, frágil, transparente, mui lisa y brillante, un poco acuminada por detras, ensanchada hácia lo alto. Cavi- dades numerosas que á veces llegan hasta diez, comprimidas, mui estrechas y aproximadas hácia la extremidad inferior. Se prolongan mas y mas avanzando hácia lo alto, siendo á pesar de todo mas anchas que largas, cubriéndose como en la tercera parte de su longitud, y dejando una sutura mui marcada entre cada una; á veces esta sutura suele ser ondeada en lugar de ser derecha. Abertura mui estrecha en hendidura, lijeramente ensanchada hácia la parte media. Color blanco. Esta especie se distingue de la Lincura alata por su falta de extension lateral en las carinas laterales. Con duda la colocamos entre las conchas de las Antillas. La hemos indicado en muestro Cuadro de los Cephalopodes como propia de estas islas, sin duda despues de haberla encontrado en la are- na; sin embargo, en nuestras nuevas investigaciones no hemos encontrado otros individuos, lo que nos hace creer habernos engañado en nuestra primera indicacion. Es comun en las Canarias principalmente en Tenerife, y Soldani la indica en Sienna entre los terrenos terciarios de forma- cion moderna. GÉNERO 8°. RIMULINA. — (4Orbigny.) Concha libre, regular, equilátera, prolongada, arqueada. Cavidades poco globulosas, oblicuas, cubriéndose parcialmente, sin estrecheces; la última convexa: eje ficticio, arqueado, la convexidad del lado de la abertura. 4bertura en hendidura longitudinal ocupando en el costado casi toda la longitud de la última cavidad. (Mopères, по 53, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Las Rimulinas por la forma exterior se parecen á las Dentalinas, que tienen tambien el conjunto arqueado y las cavidades cubriéndose en parte. Se distinguen por una abertura longitudinal que ocupa casi toda la longitud dorsal de la última cavidad, mientras que en las Dentalinas la abertura es redonda y colocada solamente en la extremidad de la cavidad. Este género difiere de las Lingulinas en que la concha es oblicua en lugar de ser derecha y en que su abertura está en el dorso y no al fin de la cavidad. Era desconocido antes de nuestras inves- tigaciones. " No hemos visto hasta la presente mas que una sola especie viva en el mar Adriático. Mo. Bot. Garden, 1297. 30 FORAMINIFERAS. GÉNERO 4°. VAGINULIN — (d'Orb.) Nautius, Linneo, Gmel., еіс.; ORTHOCERA, Lamarck. Concha libre, prolongada, equilátera, cónica, deprimida ó angulosa. Cavidades sobrepuestas unas á otras sin cubrirse, un poco oblicuas sin mostrar nunca tendencia á la espiral; la última siempre truncada, cóncava y sin prolongacion. Abertura redondeada, marginal, colocada dentro de la concavidad siempre en uno de los ángulos salientes de la concha. (Морт, n° 54, 3° li- vraison; по 4, 1% livraison.) Relaciones y diferencias. Por el apilamiento de sus cavidades sobre un eje ficticto derecho, por su falta de prolongacion, las Vacınurmas se aproximan á las Orrtnocermas; pero se distinguen por la concha siempre comprimida, por las cavidades oblicuas, por la abertura marginal en lugar de ser central, en fin por su contextura brillante y no rugosa y por los adornos en relieve de que están cubiertas. El nombre que las hemos dado recuerda su figura de vainilla ó parecida á las silicuas de las leguminosas. Todas las especies que conocemos pertenecen al mar Adriático, y son ocho. Una de las especies, la VacrvuLima legumen, está señalada hace ya mucho tiempo. Era un Nav- тиз para Linneo, Gmelin, etc., y un ORTHOCERA para Lamarck. No se conocian bien sus relaciones con las otras conchas de cavidades apiladas sobre una misma linea. GÉNERO 5°. MARCINULI A. — (FOrb.) Concha libre, regular, equilátera, prolongada, arqueada, á veces contorneada posteriormente en forma de cayado. Cavidades globulosas cubriéndose parcialmente; la última siempre convexa y á veces prolongada en sifon; las primeras revueltas hácia atras y teniendo en algunas especies un principio de enroscamiento espiral. Eje ficticio arqueado, la convexidad del mismo lado que la abertura. 4bertura redondeada, situada por lo regular en la extremidad de una prolongacion de la última cavidad en el borde. (Movizes, по 6, 1" livraison.) Relaciones y diferencias. Este género difiere de las VacivuLIvas de abertura marginal por su última cavidad convexa en lugar de ser cóncava, por la prolongacion en que está situada la aber- tura y por su forma revuelta hácia atras acusando una tendencia marcada á la espiral. Si le comparamos á las otras conchas arqueadas veremos, por ejemplo, que las Dentalinas están siem- pre arqueadas de modo que la convexidad esté del lado opuesto á la abertura, mientras que en las Marginulinas es al contrario. Este caracter en apariencia sin valor tiene no obstante mucho relativamente al crecimiento de la concha, porque la encorvadura de las Dentalinas és del todo FORAMINIFERAS. 51 opuesta al principio del enroscamiento espiral, mientras que la de las Marginulinas nos presenta ya un lijero enroscamiento posterior y un paso evidente á las conchas espirales, á las Espirolinas por ejemplo. Si hai algunas especies de Маһсіхолма que tienen casi una vuelta de espira posterior, posible establecer una cadena continua, este género vendría á colocarse inmediatamente despues delas Cristellarias; pero como otras muchas especies que no pueden separarse no tienen mas que una lijera encorvadura, no podemos sustraerlas de las Stichostegas. Han sido confundidas por Linneo con el nombre de Nauritus, y por Lamarck con el de Or- y si fuese THOCERA. Conocemos en este género diez y seis especies cuya mayor parte viven en el Adriático, otras en las Canarias; las encontramos fosiles en los terrenos terciarios de las inmediaciones de Sienna, en Italia, y en las cercanías de Dax. Cinco se manifiestan en la arcilla blanca del depósito de Paris. 2: SECCION. Muchas aberturas. GÉNERO 7°. CONULINA. — (d'Orbigny.) Concha libre, regular, equilátera, cónica. Cavidades aplicadas unas sobre otras sin rebasar; la última casi plana por encima y sin prolongacion. Aberturas numerosas, taladradas en la parte superior de la última cavidad. ( Морёкз, n° 101, 5° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género se aproxima а las Orrnocerixas por su forma general, por el apilamiento cónico de sus cavidades, por la falta de estrechez entre ellas; pero se distingue en que en lugar de estar calado de una sola abertura central, lo está de muchos agujeros en toda la superficie de su última cavidad. La única especie que conocemos es de la isla de Cuba, en las Antillas. 59 FORAMINIFERAS. N° 8. CONULINA CONICA. — (YOrbigny.) LAM. 1, FIG. 15 y 16. Cowunixa. Testa conico-oblonga, recta, crassa, albida, postice acuminata, antice truncata, subplana; loculis numerosis, augustalis ; aperturis numero- sis, rotundis. IS ees аныны ЖЕТ БВС e 3 millim. Concha corta, derecha, turriculada, mui cónica, creciendo casi regularmente de la primera á la última cavidad, ó solamente un poco ventruda en su totalidad, extremidad posterior acuminada, parte superior truncada. Cavidades estrechas, numerosas, mui aproximadas transversalmente, re- gulares, poco distintas ; la última plana ó lijeramente convexa por encima, horadada en toda su superficie de un gran número de aberturas igualmente espaciadas. Color blanco. Esta especie singular, única en su género, parece tener poco intervalo entre cada cavidad, y el intervalo es mui irregular, La hemos encontrado en la arena de la isla de Cuba que nos ha sido comunicada por el Sr. de la Sagra; parece mui rara puesto que no poseemos mas que un solo ejemplar. PAVONINA. — (d'Orb. Concha libre, regular, equilátera, suborbicular ó flabeliforme, comprimida. Cavidades concén- tricas, deprimidas, describiendo cada una en particular una parte de círculo tanto mayor cuanto ellas van siendo superiores. Comienzan por una celdita oval sobre el costado superior, de la que se suceden y aplican las siguientes formando una parte de círculo sin rebasar ni cubrirse unas á otras. Eje ficticio derecho. Aberturas redondas, numerosas, abiertas en una línea transversal yen toda la parte superior media de la última cavidad. ( Морёгкз, по 56, Зе livraison.) Relaciones y diferencias. Por su forma comprimida lateralmente, las Pavonmas solo tienen rela- cion con las FroxbicuLarias. Lo mismo que en estas últimas las ca suceden sin rebasar; pero las PavoxINas se distinguen en que en lu colocada sobre la convexidad de la última cavidad tienen muchas en una línea paralela á la com- presion lateral, línea que ocupa toda la longitud de la cavidad. La semejanza de la concha con las líneas concéntricas de la Urva pavonia y con la extremidad de las plumas del pabo real, nos ha de- terminado á llamarla Рлуоміхл. Este género era desconocido antes de Todavía no tenemos mas que una especie comun en la arena de la isla vidades son flabeliformes y se gar de tener una sola abertura nuestras investigaciones. de Madagascar. FORAMINIFERAs. 2: FAMILIA. INEQUILATERA LIDAE. — (40%) Concha inequilálera, fija. WEBBINA. — (dOrb.) Concha fija, inequilátera, irregular, prolongada, arqueada, convexa por encima, plana por de- bajo. Cavidades deprimidas, convexas por encima y planas por debajo, ovaladas, cubriéndose solo á su extremidad, cada una representando la mitad sobre la línea longitudinal de las cavidades de los géneros precedentes. Eje ficticio contorneado. 4bertura única, redonda, colocada en la extremidad y encima de la última cavidad ó del todo lateral á el eje longitudinal; contextura rugosa. (Морёте, no 102, 5° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género difiere esencialmente de todas las otras Stichostegas en que la concha inequilátera y no regular está fija en lugar de ser libre; por otra parte presenta anomalía entre los otros géneros de esta familia, como el Pleuronectes entre los pescados de partes pares: en efecto, es por decirlo así una Nodosaria que por haber sido comprimida se hubiese aplas- tado de un lado sin dejar de ser convexa por el otro, mientras que la abertura se hubiese vuelto para quedar arriba. Para establecer otra comparacion, es en cierto modo una Nodosaria cortada longitudinalmente y aplicada así sobre los diferentes cuerpos. No tenemos todavía de este singular género mas que una sola especie que hemos encontrado en las arenas de las islas Canarias; la hemos dedicado 4 M. Barker Webb, como un homenaje de nuestra alta estimacion. Е s ‚2 s gi ИТЧЕ? | а De- Е А i angia z 65 = 0 Е du EY o E Е А Ti PTA ЕС | Ма? ШАО ия т тиф ateo IEEE DE Й т a { Е. i a Л И $ ый, uy pr { 7 1 A pe EA a ы В сыйчу Hindi os a УЯ о АУТ тана Р ОНЕУ sR : | A КОШУЛ ЫЛ А Н Тосон a › арй A NT la 115057 E E ан аре АИТ ЕСЕТА Е ИТЕ Г í % ї 47; i š К eT ї I Ta і | л» КҮТ зА коша тайм УТ ña POETA Гаа ра amin Toro pio: y rc ОИ ТИ; L ди: йз» q) cs y зай ЭЩ І so ojear љарегаів е ¡rd > A И А орожо айр б. e o IN ТАУ «к ишш) ж E ОО ОЧА Ше ИЗ уз сэу A ИЙЕР. аА у Cade хиад ати а <> Ор Күр у с. ra С кый акти ea ORDEN 3°. HELICOSTEGAS (). — (2020. Caracteres. Cavidades apiladas ó sobrepuestas sobre un eje, formando una voluta espiral, regular y bien caracterizada. Espira oblicua ó enroscada sobre el mismo plano. El modo de crecer de las conchas de este órden es poco diferente y tan sencillo como el del órden que precede. Comienzan igualmente por una cavidad oval б comprimida, horadada de una abertura ; sobre esta cavidad y de modo que cubran la parte horadada vienen sucesivamente á co- locarse otras mas ó menos numerosas ; pero сото estas cavidades son mas estrechas de un lado que de otro y se aplican siempre á un mismo lado, su totalidad sobre un mismo eje forma siempre una espiral regular diversamente enroscada. Así las Heli se disti de las Sticl en que el apilamiento de las cavidades sobre un solo eje compone una espiral en lugar de prolon- garse siempre sobre una línea recta ó solamente arqueada; se distinguen de las Entomostegas en que las cavidades están en un solo eje espiral en lugar de estar en dos; de las Enalostegas por el crecimiento alterno y longitudinal de las conchas de este órden; de las Agatistegas en que en éstas el enroscamiento forma peloton y no espira regular. En este órden encontramos á primera vista dos lificaci del enr i espiral de las cavidades, una en que el enroscamiento se verifica en el mismo plano formando desde luego conchas de lados iguales y de las que componemos por la analogía de su forma la familia de las Nautiloideas; otra en que el enroscamiento es oblicuo y determina siempre una espiral mas sa- liente de un lado que de otro, trochodea ó turriculada, y que nos proporciona los caracteres de nuestra familia de las Turbinoideas. Descendiendo en seguida á los caracteres de cada uno de los géneros que componen estas fami- lias, dividimos las Nautiloideas en dos secciones segun el número de aberturas únicas ó multiplica- das. Las conchas de una abertura redonda en el borde carenal son las CrisreLLartas; de abertura triangular, las Ковошмаѕ. Cuando la abertura en hendidura y aparente en todas las edades es contra la vuelta de la espira, son nuestras Nonroniwas; con frecuencia enmascaradas ‚ las Nummu- 1 De ёё, espiral, y de вте үп, habitacion б piso. 56 FORAMINIFERAS. 36 umas; triangular la espira aparente, nuestras OPERCULINAS; cuando la abertura ocupa toda la lon- gitud de la última celda, son nuestras VerrerraLrvas. En la segunda seccion de muchas aberturas formamos dos divisiones, la primera de conchas que tienen una sola cavidad por celdas, en la que cuando las aberturas están encima de la última cavidad y en los lados, son las POLYSTOMELLAS, y cuando no hai mas que las aberturas de encima de la última cavidad, son las Pexeropras. En la segunda division de conchas de muchas aberturas, donde reunimos aquellas cuyas cavidades están divididas por compartimientos cuando las aberturas son longitudinales al enroscamiento espiral, son las OrnicuLivas, y cuando son transversales son las ALVEOLINAS. La familia de las Turbinoideas mas complicada se divide en dos secciones, segun que el modo de crecer se cambia ó es el mismo en todas las edades. En la primera las dividimos segun la abertura ó aberturas de la concha. Entre las conchas de una sola abertura, cuando es en forma de media luna y sobre la última cavidad solamente, en medio de la cavidad, son las RoraLrxas; en el ángulo umbilical, son las GLon1cermas, y del lado de la espira, las PLaxorBULINAS. Cuando la abertura es continua de una á otra cavidad por el lado de la espira envolviendo la espira por arriba, son las TruxcaruLixas ; cuando las vueltas de la espira envuelven por los dos lados, las ANOMALINAS, у cuando la abertura está en el lado opuesto á la espira, son las RosaLrwas. Vienen en seguida las conchas turriculares, entre las cuales cuando la abertura está cubierta con una valbula, son las VaLvuLivas; cuando esta abertura está hendida en el eje espiral, son las Venxeuinrvas; cuando la abertura es virgular, son las Bermanas; cuando es redonda en la extremidad de un tubo, son las UvicerINAS, y cuando es redonda sin tubo, las PrruL1vas. La segunda division contiene las conchas de muchas aberturas y solo encierra dos géneros: las Слхрихаѕ, que tienen las aberturas en las suturas de las cavidades, y las CnrxsaLiIxas, que las tienen en toda la superficie de las tres últi- mas cavidades. La segunda seccion de las Turbinoideas, cuya concha cambia de forma abandonando á cierta edad el enroscamiento espiral, forma dos géneros : en el primiro las CLayuLtvas, la concha á lo pri- mero turriculada se proyecta en línea recta, como en las Stichostegas ; en el segundo las GAuDRYINAS, la concha turriculada en la juventud se compone despues de cavidades alternas lo mismo absoluta- mente que las Textularias entre las Enalostegas. El cuadro siguiente presentará el conjunto comparativo de las principales modificaciones. HELICOSTEGAS. 1° FAMILIA. NAUTILODA. Concha equilátera; espira enroscada sobre el mismo plano, m | / [ Redonda. — Cavidades ЕРОТ CRISTELLARIA «| | Abertura en el ángulo \ Redonda. — Cavidades angulares еп la edad \ carenal, ) adulta... TF FLABELLINA. узан \ Triangular. . е ROBULINA. е І 1 | И mpre aparente NONIONINA. | Abertura contra la Con frecuencia cubierta. ... NUMMULINA. vuelta de la espira. | Triangular. — Espira aparente . .. OPERCULINA. Abertura que ocupa todo el ancho de la última cavidad... .. VERTEBRALINA. Aberturas en la última cavidad y en los lados. PoLYSTOMELLA. Cavidades sencillas. z Aberturas solo еп la última cavidad......... PENEROPLIS. SEGUNDA SECCION» Ч / Aberturas en líneas longitudinales al епгоѕса- Cavidadesdivididasen | compartimentos. miento espiral ORBICULINA. Muchas aberturas. ) Aberturas en líneas transversales al enrosca- miento espiral... ...... ed ALVEOLINA.. FORAMINIFERAS. 57 HELICOSTEGAS. 2% FAMILIA. TURBINOID Æ. Concha inequilátera; espira епгозсайа oblicuamente. / е En medio de la anchura j Abertura en media ч de la cavidad........ ROTALINA. | luna solo en ау, K | Е En el ángulo umbilical... GLOBIGERINA+ última cavidad. i Del lado de la espira... .. PLANORBULINA. / Del lado espiral. Espira aparentesolo por un lado. TRUNCATULINA. Abertura en hen- | р АЯ 5 А Я Espira abrazante рог los PRIMERA SECCION. РО r P E dad М dos lados............ ÁNOMALINA. а de una cavi- А Я a Una sola abertura, 3 Del lado opuestoá la espi- = dad á otra. р та. Espira abrazante рог La misma forma еп 4 аас пето РУ ROSALINA. | Abertura con una válvula ......... . © VALVULINA. | + VERNEUILINA. Abertura en hendidura transversal al eje Espiral completa. Abertura virgular, longitudinal al eje... - BULIMINA. Abertura redonda al final de una prolongacion.. UVIGERINA. Abertura redonda sin prolongación... ....... PYRULINA. SEGUNDA SEOGION., Al rededor de las cavidades....... OOO CANDEINA. | 5 \ Muchas aberturas. З \ Пра оо Оноо оо оо + CHRYSALIDINA. SEGUNDA DIVISION. Concha espiral еп la juventud, proyect pue da en linea recta en la edad Cambio de forma espi- co. .. CLAVULINA. ral solo en la ju- ventud. Concha espiral en la juventud; cavidades alternas en seguida...... 1... GAUDRYINA Mas multiplicado en especies que los demas órdenes; éste nos ofrece mayor complicacion de caracteres y de formas; no obstante, si entre algunos géneros se encuentran pasos evidentes que pueden dejar alguna indecision al clasificarlos, no sucede lo mismo con otros cuyos caracteres no pueden ser mas determinados. Encontramos entre las especies de este órden una contextura aná- loga, es decir, que mas ó menos vitreas son con pocas excepciones siempre perforadas ó punteadas y pueden haberse formado del mismo modo y de los mismos elementos. Las excepciones son los géneros CristELLARIA , RopuLixa, NuMMuLINa y OPERCULINA, cuya contextura es mas ораса, mas vitrea todavía y casi siempre lisa; sin embargo, á pesar de esta diferencia que puede ser impor- tante no tenemos ninguna indicacion que pueda zoológicamente hacerla mirar como distinta de las otras. Hemos observado los animales de algunas especies de los géneros М№оміоміхл, PoLYSTOMELLA , ROTALINA, TRUNCATULINA y RosaLixa y no hemos visto en ellos mas que caracteres generales idénticos como ya lo hemos dicho en las generalidades. Efectivamente lo interior de las cavidades Б 58 FORAMINIFERAS. está lleno de la misma materia glutinosa y los filamentos que salen por aberturas y poros son igual- mente semejantes. Esta uniformidad de animales en conchas por otra parte tan desemejantes es la que nos hace dar mas importancia á los caracteres diferenciales de estos últimos. El modo de crecer en espiral de las conchas de este Órden, tan diferente de los demas, nos ofrece entre tanto muchos pasos que las unen íntimamente y establecen relaciones evidentes. 1° Las Esporas entre las Nautiloideas, que despues de haberse enroscado en espiral envol- viente se proyectan despues 4 cierta edad en línea recta. Las CLavurrsas entre las Turbinoideas que se proyectan tambien en la edad adulta ofrecen un paso evidente á las Stichostegas. 20 El género Gaubryixa despues de haberse contorneado en espiral turriculada se proyecta en seguida en cavidades alternas como las Textularias, y ofrece un paso del mismo género con las Enalostegas. Зо El enroscamiento espiral de todos los géneros de las Entomostegas las aproxima de este órden , del que no se distinguen mas que por sus cavidades alternas. до En fin, el apelotonamiento en dos caras de las BiLocuLINAS y SPROLOCULINAS ез el represen- tante de una espira real y establece un eslabon 1 diato con las Agati Así los pasos de las Helicostegas á los otros órdenes son evidentes; pero como no puede es- tablecerse una línea continua con cada uno de ellos, los representamos por relaciones radiantes. Paso å las STICHOSTEGAS por las CLavuLina y ESPIROLINA. HELICOSTE= GAS. Paso á las ENTOMOSTEGAS рог las CASSIDULINA, AMPHISTEGINA у ÁSTERIGERINA. “VNIAUANVS Se] SVOAISOTVN Se] е osed Paso å las ÅGATISTEGAS por las BILOCULINA у SPIROLOCULINA. Si echamos una rápida ojeada sobre la distribucion geográfica actual de los géneros de las He- licostegas vivas veremos álas CRIsTELLARIA mui comunes en el Adriático, mas raras ер el Medi- terraneo, Antillas y Canarias, mostrarse en vestijios en la Oceanía ; las RopuLrva mui numerosas tambien en el Adriático y en el Mediterraneo, y viéndose rara vez en las Canarias : no los conoce- mos en las otras partes del mundo. Las Noxioixa, de todos los mares sin excepcion, aunque mas FORAMINIFERAS. 59 numerosas en el Adriático. Las NumwuLiva se hallan en pequeño número еп la Oceanía y en el mar Rojo; las OPERCULINA habitan la Nueva Olanda, Madagascar y las Antillas; las VERTEBRALINA las Antillas, el Mediterraneo, el mar Rojo y la Oceania. Las PoLysTOMELLA SOn de todos los mares calientes y templados, lo mismo que las PENEROPLIS, mui comunes en el Mediterraneo y en las Anti- llas. Las OrsrcuLixa son especiales de las Antillas y la India; las ALvsoLIwa no se han encontrado vivas aun sino en la Oceanía y en las Antillas. En la segunda familia, las RoraLiva y las GLOBIGERINA, están por decirlo así repartidas por to- das partes; mas numerosas sin embargo en el Adriático, las Antillas y las Canarias. Las PLANoR- вомма y PruncaruLixa son tambien del mundo entero. Las AxomaLra son hasta la presente del Adriático y de la isla de Francia. Las RosaLIxa de todos los paises; abundan sobre todo en especies en las Antillas y en el Adriático. Las VALVULINA, que rara vez se encuentran vivas, son de las Anti- las, de las Canarias, del Perú y de la Oceanía. Las Burma y las UviGERINA pululan en el Adriá- tico; pero son raras en las Antillas, Madagascar, Patagonia, Perú y Tenerife, Las CANDEINA SON de las Antillas solamente; las CLAVULINA SON especiales del Adriático, Mediterraneo y Antillas. Esta lista rápida manifiesta que solo los tres géneros VenseuiniNa, PyRULINA у GAUDRYINA no tienen aun especies vivas conocidas. Las Helicostegas fosiles de los terrenos terciarios se componen de los géneros siguientes : las CrusteLLaRIa que solo se encuentran en los terrenos subapeninos de Italia y Austria; las Ropu- iva son de las mismas capas, y una sola viene de Burdeos. Las NoxroNIxA mas comunes en los terrenos de Italia, van sin embargo disminuyendo su número en el depósito de Burdeos y Paris. Las OrencuLina sobre todo son de las cercanías de Burdeos; las PoLYSTOMELLA de Italia y algunas de la Turena; las PeweropLrs, desconocidas en Italia, son raras en las capas de Burdeos, de Dax y de Paris. Las ALveoLIxa pertenecen al depósito parisiense de Viena y del Adour. Las Rora- Lina, raras en los terrenos de Italia, están mas repartidas en los de Paris, la Gironda y la Turena. Las GLor1icErINA, comunes en los terrenos de Italia, son raras en Burdeos y en Paris. Las Trun- САТМА son comunes en todos los terrenos terciarios de Italia, de Paris, de Burdeos y aun en el crag de Inglaterra. Las Ахомлима son únicamente del depósito bordelés y de Kalensberg, cerca de Viena. Las RoraLixa de todas las capas terciarias, así como las TrUNCATULINA, mui comunes en la Turena. Las VaLvuLixa son solamente del depósito parisiense. Las Волма y las UvicERINA bastante numerosas aun en los terrenos subapeninos y en Viena, faltan en las demas capas tercia- rias y una sola especie del primer género se encuentra en Burdeos. Las CLavuLiva son de los terrenos de Italia, Paris y Burdeos; las PyruLixa de Italia solamente. Las Helicostegas de la formacion cretacea pertenecen á los géneros siguientes : las CRISTELLARIA y Frareriima de la creta blanca de Paris; las NummuLina de casi todas partes; las PoLYSTOMELLA raras en Chavagne (Maine-et-Loire) ; las PENEROPLIS (subgénero SproLma) de la creta blanca de Paris, de Inglaterra y de la Charente-Inférieure ; las ALVEOLINA de la creta inferior de la misma Charente y de la Gironda ; las Rosara de la creta superior de Maestricht y sobre todo de las cer- сапіаѕ de Paris; las Rorarina de los mismos sitios y de Chavagne; despues las VaLvuntia, Bu- талл, VERNEUILINA y GAUDRYINA mui numerosas en la creta blanca de Paris y de Inglaterra. Las CunxsaLiniva pertenecen exclusivamente á la arcilla verde de la embocadura de la Charente. Las Helicostegas de la formacion jurasica ú oolítica pertenecen todas 4 las Nautiloideas y al género CrrsreLLarra, comunes en el coral rag de la Charente-Inféricure y de la Yonne, en el calcáreo de polipos de las cercanías de Caen, el lias de los departamentos de Deux-Sèvres y de la Vendée, etc. Si despues de haber hecho conocer rápidamente la distribucion de los géneros de Helicostegas abrazamos el conjunto numérico de las especies sin hacer cuenta de las formas, encontramos que sobre cuatrocientas cincuenta y seis, poco mas © menos que conocemos, doscientas cincuenta son vivas y doscientas seis fosiles de los terrenos terciarios, cretaceos y ¡jurasicos. De las doscientas cincuenta vivas, sesenta son del mar Adriático, cincuenta y dos de la isla de Cuba y de las Antillas, treinta y tres del Mediterraneo, veinte y una de las Canarias, doce de la Oceanía, ocho de las costas del Oceano, en el litoral de Francia, y el resto distribuido en Mada- gascar, en la India, en la isla de Santa Elena, en las islas Marianas, en la isla de Francia, en el cabo de Buena Esperanza, en Terranova, en el Perú, en Patagonia, etc. 60 FORAMINIFERAS. De las doscientas seis fosiles, ciento treinta son de los terrenos terciarios, y de ellas cincuenta de los terrenos subapeninos de Italia y de las cercanías de Viena, conteniendo diez especies que tie- nen sus análogas vivas en el Adriático ó el Mediterraneo. Cuarenta del depósito terciario de Paris, veinte y una de el de la Gironda que contiene tres cuyas análogas vivas están en el Adriá- tico, doce de Dax, ocho de la Turena; las demas son de Kalensberh (Austria), de la Bélgica y del crag de Inglaterra. De las cuarenta y cinco de la formacion cretacea tenemos veinte y dos de la creta superior blanca de Paris y de Inglaterra, ocho de Maestricht, dos de Chavagne (Maine-et-Loire), siete de la creta inferior de la Charente-Inférieure, cuatro de la arcilla verde de la Sarthe y siete de la arcilla verde de la embocadura de la Charente. Cuanto á las diez de la formacion jurasica ú oolítica son de las capas superiores del departa- mento de la Yonne, del coral rag de la Charente-Inférieure, del calcareo de polipos de las cercanías de Caen y del lias de Deux-Sèvres y de la Vandée. La historia de este órden es por decirlo así la historia de las Foraminiferas : á ella nos remitimos dando aquí tan solo una rápida ojeada. En 1739 Plancus ' publicó una especie con el nombre de Cornu Hammonis; dió en 1744 otra en su edicion de Columna °, en 1764. Ledermuller * reprodujo las especies de Plancus con el nombre de Cuernos de Ammon y añadió algunas otras. Gualtieri* en 1742 colocó el primero las especies equiláteras en los Naurizus y las demas en el género AMMONIA ; Ginnani * en 1757 figuró algunas especies : todas estas figuras fueron despues reunidas por Linneo en 1767 ° con el nombre de NaurrLus, conservadas por Gmelin en 1789 7, por Martini en 1769 °, por Schraeter en 1783 °, por Schreiber en 1793 '”. Soldani en 1780" y en 1787 * dió mas que todos los otros autores, pero como iconografía mas bien que ciencia, porque representadas con frecuencia por un solo lado es imposible referirlas positivamente á un género determinado ; Bosc en 1802 ' estableció el género ALVEOLITES; Montagu '* y Fichtel y Moll el año siguiente ** dieron las mejores figuras que habian aparecido hasta entonces, siempre como Naurius. Lamarck en 18041 estableció el primero algunas divisiones de géneros en especies fosiles de las cercanías de Paris con los nombres de Discorbis, Rotalia, Lenticulina, Lituola, Spirolina y Renulina. Cuatro años mas tarde Montfort '%, sin tener en cuenta los trabajos de Lamarck y segun su costumbre sin haber visto ninguna de las especies naturales, creó tantos géneros como variedades de las mismas espe- cies, copiando y desnaturalizando las figuras de Soldani, de Fichtel y Moll y otros autores ; así se hizo con razon mui poco caso de estos géneros en los diferentes sistemas. Lamarck aun en 1812 '* y en 1822 " estableció muchos géneros nuevos con arreglo á las figuras de Fichtel y Moll y con- chas que el poseía. Estos géneros son los CristeLLarta, ORBICULINA, MELONITES (ALvzoLrres, Bosc.), PLACENTULA, SIDEROLITES, VORTICIALIS y PorysromeLLa. М. de Blainville en 1825 conservó estos géneros en su Malacología sin añadir otros nuevos. Las cosas se hallaban en tal estado cuando di- mos á conocer nuestro primer trabajo presentado á la Academia de ciencias en 1823, trabajo en el que estableciamos los verdaderos caracteres de los géneros, reduciendo los que ya eran conocidosá las divisiones reales y añadiendo un gran número nuevos enteramente. En nuestras divisiones actuales introducimos muchos cambios de la antigua division; suprimi- mos las Ammonoideas que entran en las Nautiloideas y Turbinoideas que erijimos en familias; * Ariminensis de conchis minus notis, t. 1, fig. 1. '' Saggio orittografico overo, ete., Sienna. > Phytobasanos, t. XXXVIII, fig. D, E. 2 Te g ас zoophytog parva el ? Amusemens microscopiques, t. IV, fig. B, 1. ҮШ, Sienna, 1787 а 1799. йв. А,В, С. 1 Buffon de Deterville, * Mare Adriatico. $4 Testacea britannica, pág. 186. з Indez testaceorum, t. XIX. 1% Testacea microscopica aliaque minuta, cte. Viena, 1803. © Systema nature, ed. ХИ, pág. 274 y siguientes. 1% Annales du Muséam d'histoire natarelle, 1. V. 7 Systema nature, ed. ХШ. 1 Conclyliologie systématique. è Conchilien cabinet, pág. 248 y siguientes. '* Extrait de son cours. > Einleitung, ete. 1% Animaux sans vertèbres, t. T. 1 Berfach, (1. FORAMINIFERAS. 61 separamos del género RoraLra algunas especies para formar nuestras Asterigerinas, pertenecientes á las Entomostegas; despues añadimos en este órden las Orbiculinas y Alveolinas que estaban en- tre las Entomostegas, y añadimos tambien las Planularias reunidas actualmente á las Cristellarias. De los géneros suprimimos algunos como pertenecientes á otros ya establecidos; reunimos otros como subgéneros, y entre las especies introducimos los cambios que nuestras nuevas investigacio- nes nos han movido á hacer, cuidando mas de perfeccionar muestro método y hacer desaparecer los errores que hubiésemos podido cometer, que del amor propio de conservar intacto nuestro primer trabajo. : Tenemos en Cuba cincuenta y dos especies así repartidas por familias, por géneros y subgéneros. 7 == | A рок POR FAMILIAS. GÉNEROS. SUBGÉNEROS. | GÉNERO. | FAMILIA: / CRISTELLARIA ...... А RE 2 | NONIONINA + ов 3 \ 1 VERTE 2 2 / NAUTILOIDE 0 .... PoLYSTOMELLA. . 4 19 { DENDRITINA . 1 PENEROPLIS ...... 7 | PENEROPLIS + 8 ORBICULIMA. + - 2 \ ALVEOLINA +... Е 1 HELICOSTEGAS ......< ROTALINA. . 71 ROTALINA + CALCARINA 2 GLOBIGERINA. +. + 3 PLANORBULINA + 1 Í TRUNCATULINA . . 2 \ TURBINOIDA. . ‚{ ROSALINA... . 12 V 33 VALVYULINA 1 BULIMINA .. 1 UvIGERINA.. ТЇ CANDEINA + . 1 \ CLAVULINA . 2 | TOTALES. ...... 52 52 La comparacion del cuadro que precede con el de la página 57, prueba que de las Helicostegas no faltan hasta la presente en Cuba mas que los géneros FLABELLINA, RoBULINA, NUMMULINA, Ano- MALINA, VERNEUILINA, PYRULINA, GAUDRYINA y CHRISALIDINA , de las cuales cuatro solo se han encon- trado hasta ahora en las capas cretaceas. 62 FORAMINIFERAS. 1° FAMILIA. NAUTILOIDAE. — (4Orb.) Caracteres. Concha libre, regular, equilátera, espira regular, enroscada y sobre el mismo plano, envolviente ó no. Contexlura de la concha vitrea, traslucida ú opaca. 1* SECCION. Una sola abertura; contextura vitrea, traslucida. 1* DIVISION. Abertura en el ángulo carenal. GENERO 1°. CRISTELLARIA. Naurmus, Linn., Gmel., Sold., etc.; géneros LINTHURIE, OREADE, SCORTIME, AsracoLE, Montfort; género CrIsTELLARIA, Lamarck, Defrance; géneros Pra- NULARIA, SARACENARIA, Defrance; géneros LINTHURIE, OREADE, SARACENARIA , CREPIDULINA, Blanville; PLANULARIA y CRISTELLARIA, d'Orbigny. Concha libre, regular, equilátera, oblonga ú oval, comprimida, muchas veces carinada, de una contextura brillante y vitrea, cubierta frecuentemente por arriba de líneas salientes y protuberancias. Espira envolviente por entero, á veces apenas compuesta de una vuelta ó de una media vuelta. Ca- vidades comprimidas, prolongadas, á veces incorporándose con la vuelta de la espira ó un poco proyectadas y oblicuas. Abertura redondeada, situada en el ángulo carinal de las cavidades, es de- cir, del lado opuesto á la vuelta de la espira. ( Mopères, по 19, 1т° livraison; по 44, 2° livraison; nos 83, 84, 85, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Comparado á los otros géneros de esta familia, el presente se aproxima á las Roputixas por la forma general y por el sitio de su abertura en el costado dorsal, distinguiéndose al mismo tiempo por la forma de esta abertura, redonda en las Cristellarias y pro- longada triangular en las Xobulinas. Tampoco se puede negar que entre las especies menos en- roscadas de este género y las que lo están mas en las Marginulinas, uno de los últimos géneros de Stichostegas, no haya un paso evidente que nos ha determinado á colocarlas no lejos una de otra aunque en dos órdenes diferentes. Este género compuesto de gruesas especies está por lo pronto descrito como un NauriLus por FORAMINIFERAS. 63 Linneo. Segun las figuras dadas por Fichtel y Moll y por Soldani!, Montfort en 1808, desnatura- lizándolas mas б menos, creó los géneros LINTHURIA , OREADE, SCORTIME у ASTACOLE, á los cuales no asignó realmente caracter alguno. Lamarck en 1812 los reunió todos con el nombre de CristELLA- nia que hemos conservado. M. Defrance ? conservó el nombre de Lamarck á una parte de las es- ресіеѕ y creó los géneros Saracenanta y Pranuraria para las otras. М. de Blainville* adoptó los géneros Liwrmuria y Овклрь® de Montfort, las Seracexarta de M. Defrance y añadió las CrepruL- xas para la Asracore de Montfort, colocando las especies conocidas. Tocante á nosotros, en la época de nuestro primer cuadro en 1825 habiamos admitido solamente dos géneros, el CristELLA- мл y PLanuraria, añadiendo un gran número de especies; pero hoi dia despues de un maduro exámen, hemos creido se debian reunir en uno solo con el nombre de Cristeriarra sin dividirlas en subgéneros, porque no tenemos límite alguno para las secciones. Hemos observado hasta la presente treinta y siete especies de este género, de las cuales quince vivas y veinte y dos fosiles. De las primeras, ocho del Adriático, dos del Mediterraneo, dos de las Antillas, dos de las Canarias y una de Rawack. De las especies fosiles, por una singularidad bas- tante curiosa encontramos trece en los terrenos terciarios de Italia, en las cercanías de Sienna, despues ninguna en todas las demas capas hasta -que aparecen dos en la creta blanca de Paris y siete en la formacion oolítica del calcareo de polipos de Caen. No solo estas especies están desigual- mente repartidas en su estado vivo, sino que sucede lo mismo en las capas fosiles. No 9. CRISTELLARIA GIBBA. — (Wob.) LAM. үп, FIG. 20 y 21. CrisreLLARIA gibba, d'Orbig., 1825, Tableau de Céphal., р. 126, п" 17. CRISTELLARIA. Testa oblongo-convexa, inflata, subcarinata, leevigata, ni- tida, flavescens; loculis decem, elongatis, arcuatis, ultimo supra subconcavo limbato; suluris complanatis; umbilico impresso; apertura marginata, radiata. DAM A E cedo O EIE A 1/, millim. Concha oblonga, bastante convexa, inflada en el medio de su anchura, adelgazada y entera en los bordes, carena obtusa y ancha, contextura brillante y lisa. Cavidades en número de diez á once uniéndose á la vuelta de la espira, prolongadas, un poco arqueadas, planas, sin otra marca de su- turas mas que la transpariencia ; la última cavidad un poco menos elevada que las otras, truncada en la parte superior, un poco cóncava y rodeada de un cerquillo grueso. 4bertura redonda, ori- Пада de un cerquillo grueso y fuertemente radiado. Color blanco algo amarillento. Entre las especies sin carina cortante y sin salida alguna en las suturas, es evidentemente la mas bombeada mas inflada, y bajo este aspecto no puede ser confundida con ninguna de las que conocemos. * Testacea microscopica aliaque minuta, 1803 > Dictionnaire des sciences naturelles. з Malacologie. 64 FORAMINIFERAS. En nuestro cuadro de Cephalopodes hemos indicado esta especie сото hallada en las Antillas, porque la hemos encontrado en la arena de estas islas. Hoi dia aunque no la hemos vuelto á en- contrar la hacemos sin embargo figurar en el número de especies propias de este archipiélago : habita tambien en el Mediterraneo. N° 10. CRISTELLARIA CREPIDULA. — (dOrb.) LAM. ҮШ, FIG. 17 y 18. Nautilus crepidulus, Fichtel, 1803, tab. 19, fig. g, h, i. — Nautilus lituitatus, Soldani, 1780, Saggio orith., t. 58; fig. 66, p. 64. — Polystomella marga- ritacea, Blainv., 1825, Malac., р. 385. — Planularia crepidula, d'Orb., 1825, Tableau des Céphal., р. 94, n° 6. CrisTELLARIA. Testa oblongo-compressa, leevigata, nitida, alba, margine rotundata, integra; loculis decem, elongatis, minime arcuatis, ultimo supra convexo; suturis complanatis; apertura simplici. Пітепвіопе..........:....... ча соо он a de millim. Concha oblonga, lisa, delgada, frágil, mui brillante, mui comprimida, de ningun modo inflada por sus costados, con su contorno entero redondeado. Cavidades de diez á once uniéndose á la vuelta de la espira; todas prolongadas, poco arqueadas, planas sin salida alguna en el medio ni en las suturas ; la última redondeada y convexa en su parte superior y sin cerquillo alguno. 4bertura sencilla en el punto mas saliente del ángulo carenal. Color de un hermoso blanco. Entre las especies de dorso redondeado y sin salida sutural, nuestra Cristerrarta Bertheloti es la única que se aproxima á ésta por su compresion general, sin que por eso deje de distinguirse por menos compresion aun y por sus cavidades no proyectadas que llegan todas hasta la vuelta de la espira. Tocante á la habitacion sucede á esta especie como á la precedente, que se encuentra aun fosil en los terrenos terciarios de Sienna, en Italia. GÉNERO 2°. FLABELLINA. — (d'Orb.) Concha libre, regular, equilátera, mui comprimida, oval ú oblonga, de una contextura com- pacta, con frecuencia cubierta de cerquillos. Espira primero regular, envolviente en la juventud, despues proyectándose en una ancha superficie comprimida y angulosa. Cavidades comprimidas incorporándose á la vuelta de la espira y despues á cierta edad proyectándose en ángulos inversos apilados sobre una sola línea. 4bertura redonda en la juventud y colocada entonces en el ángulo FORAMINIFERAS. 65 carenal, mientras que en la edad adulta está en la extremidad del ángulo salienté formado por los senos de las cavidades. ( Mopètes, по 103, 5° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género es en la juventud semejante en todo а las Cristellarias, por su forma comprimida, el sitio de su abertura y aun los lados de ciertas especies; pero en edad mas avanzada las cavidades no continuan colocándose solo al costado de las precedentes, las en- vuelven tambien por la parte del dorso y representan entonces un seno inverso tanto mas regular cuanto mayor sea la eded de la concha, y este modo de rebasar continua todo el tiempo de la existencia. Cuando la concha es completa se parece mucho al género FrownrcuLarza, con el cual ha sido confundida; pero las Frondicularias se distinguen comenzando de seguida por un apilamiento sobre una misma línea longitudinal y no por una espiral como lo encontramos siempre en las Flabellinas. M. Deshayes ha confundido este género con las FroxicuLanta *, lo que le ha hecho suscitar dudas sobre los caracteres que le hemos asignado en 1825 con presencia de especies vivas y fáciles de examinar. No conocia mas que muestras Етлввіллхл y по las verdaderas FronDIcULARIA, que son tales como hemos dicho. Este género no contiene hasta la presente mas que especies propias de la capa cretacea desde la creta blanca hasta la arcilla verde, y puede ser mirado como característico de estos terrenos : cono- cemos cinco especies. GÉNERO 3°. ROBULINA. — (d'Orb.) Nautius, Plancus, Gualtieri, Linn., Gmel., etc.; géneros Puoxeme, PHARAME, HrrioNE, CLISIPHONTE, PATROCLE, LAMPADIE, ÁNTENORE, RoBULE, RHINOCURE y SPINCTERULE, Montfort; Lexnticuuwa , PorysromeLLa, Blainville. Concha libre, regular, equilátera, suborbicular, comprimida fuertemente, carenada, de una con- textura vitrea, brillante. Espira siempre envolviente. Cavidades prolongadas uniéndose á la vuelta de la espira en la parte umbilical. 4bertura triangular en hendidura longitudinal situada en el ángulo carenal de las cavidades. ( Mopères , по 14, 1'е livraison, у по 82, Ле livraison.) Relaciones y diferencias. Por el sitio marginal de la abertura, por la contextura, la carena y los accidentes exteriores de la concha, no podemos comparar este género mas que á las Cristellarias. Sin embargo, difiere en que su abertura es en hendidura triangular en vez de ser redonda, por su enroscamiento espiral mucho mas completo, por su forma nautiloide mas regular, lo mismo que por su disco umbilical casi siempre mui pronunciado. La primera especie fué descrita en 1739 por Plancus? con el nombre de Cornu Hammonis. Esta especie aun con el nombre de Cuerno de Ammon fué copiada por Ledermuller ° y representada por Gualtieri *. Linneo en 1767 formó de ella un Nautius con el nombre de Naurmus calcar, y este nombre de género fué conservado por Schroeter, Martini, Gmelin, Fichtel y Moll, Montagu, etc. 1 Eneyolopédie méthodique, articulo Frondicnlaire, 3 Amusemens microscopiques, t. XIM, fig, D. * Ariminensis de conchis minns notis, t. 1, fig. 2, 3. í Index Test., 0. 19, fig. В 66 FORAMINIFERAS. Soldani la llamó LewncuLa y NautiLus. Montfort’ segun su costumbre hizo á vista de las figuras de los autores citados mas géneros que especies y estableció en 1808 sus géneros Рнохеме , РнАВАМЕ, Herrons, CLISIPHONTE, PATROCLE , LAMPADIE, ANTENORE, Ковше, Кніхосоке y SrincrerutE, de los cuales seis entran en dos especies solamente. Lamarck las hizo LewricuLras refiriéndolas á los mismos géneros que las aspecies fosiles de Soissons, de las que hemos hecho una NummuLixa. Este nombre ha sido conservado por М. de Blainville ?, у una especie del cual (el Nauritus vortex) está colocada como Polystomella. Cuando hemos hecho conocer los verdaderos caracteres de este grupo le hemos llamado Ковоима, de uno de los nombres de género de Montfort : hoi dia no alteramos en nada esta seccion bien caracterizada. Hemos observado veinte y cinco especies, de las cuales diez y seis vivas así repartidas: diez en el Adriático, cinco en el Mediterraneo y una en las Canarias. De las nueve especies fosiles, ocho son de los terrenos terciarios de Sienna, de la Coroncina en Italia б de Viena en Austria. Una sola es de Burdeos. 2: DIVISION. Abertura contra la vuelta de la espira. Р GENERO 4°. NONIONINA. — (d'Orb.) Naurus, Walker, Montagu, Fichtel et Moll, etc., ete.; géneros NONIONE, MELONE, CANCRIDE, FLORILIE, CHRYSOLE, MACRODITE ; Montfort ; CRISTELLARIA, Lam.; PorystromerLLE, Lenricorine, Blainv. Concha libre, regular, equilátera, suborbicular, buloidea ó comprimida, con el dorso redondeado y no carinado, de una contextura generalmente vitrea, brillante. Espira siempre envolviente. Ca- vidades arqueadas uniéndose siempre á la vuelta de la espira y al centro umbilical. 4bertura en hendidura transversal contra la vuelta de la espira, y aparente en todas edades. (Monézes, по 11, 1те livraison ; nos 33 y 46, 2° livraison ; по 86, 4e livraison.) Relaciones y diferencias. En este género ya no vemos las formas comprimidas, las carenas cor- tantes y cerquillos superiores á las cavidades de las Cristellarias y Robulinas. Tampoco encon- tramos la abertura en el ángulo dorsal como en estos géneros, sino por el contrario contra la vuelta de la espira, lo que las distingue fácilmente. Entre las conchas que como éstas tienen la abertura en el mismo sitio, tenemos solamente las NummuLIas, cuya abertura está marcada con frecuencia y en las cuales la concha no tiene á veces alguna abertura aparente. Conocemos veinte y ocho especies de este género, diez y ocho vivas y diez fosiles. Entre las primeras, seis son del Adriático, cuatro del Mediterraneo, dos de Tenerife, tres de las Antillas, 1 Conchyologie systématique. 2 Malacologie, pág. 389. FORAMINIFERAS. 67 una sola de las costas del Oceano en Francia, una de Terranova, una de Madagascar, una del Perú y una del mar Rojo. Las especies fosiles son tres de los terrenos terciarios de la Italia, tres de Dax, dos de Burdeos y una de Paris. No 11. NONIONINA BROVWNIL — (4'07b.) LAM. VII, FIG. 22 y 23. NoxioNINA. Testa oblongo-compressa, subrugosa, alba, margine rotundato- subincisa; loculis novem, elongatis, arcuatis, convexis, in umbilico articu- latis, ultimo convexo, suturis excavatis; apertura angustata, lineari. Dimensiones... ...... e. . 1 fa puntos... ‚ "la de millim. Concha oblonga, comprimida en su totalidad, inflada en los costados, un poco rugosa, mui frá- gil, con el contorno convexo redondeado y como cortado por la salida de las cavidades; su creci- miento es mui rápido. Cavidades nueve, bastante anchas, convexas, arqueadas, todas provistas cerca de la parte umbilical de una especie de estrechez que separa la extremidad como en un seg- mento distinto, las suturas profundamente escavadas; la última mui convexa. Ombligo un poco cóncavo. Abertura apenas visible, linear contra la vuelta de la espira. Color blanco algo ama- rillento. Encontramos analogía entre nuestra especie y la Noxoxma elongata, fosil de Dax, por la forma general, la prolongacion y crecimiento rápido de la concha; no obstante, por el segmento de sus cavidades, lo mismo que por su convexidad, difiere completamente y constituye una especie distinta. La hemos encontrado aunque raramente en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Jamaica, recojidas por M. Fernando de Candé. Ne 12. NONIONINA GRATELOUPH. — (tOrb.) LAM. VI, FIG. 6 y 7. Җомомімл. Testa elongato-compressa, nitida, alba, tevigata, margine integra; loculis decem, elongatis, minime arcuatis, simplici, ultimo supra subcomplanato; suturis planis. Dimensiones. Diámelro........... а. 2 puntos. ..o.oooo.o.o» +... */3 de millim. Concha prolongada, comprimida, mui lisa, brillante, poco frágil, poco inflada en los costados, de contorno entero un poco carenado pero no cortante. Cavidades diez, estrechas, triangulares, 68 FORAMINIFERAS. casi derechas, unidas sin convexidades ni sutura marcada, la última truncada por encima, casi plana y lijeramente carenada en los costados. Ombligo apenas deprimido. Abertura tan poco visible que no hemos podido distinguirla. Color blanco uniforme. Habiamos confundido esta especie con la Момомічл communis tan abundante en las arenas de las cercanías de Burdeos; pero al compararla de nuevo hemos reconocido que es siempre mucho mas prolongada, mas comprimida, teniendo su crecimiento mas rápido; y como este caracter se nos ha mostrado en todos los individuos sin excepcion hemos debido considerarla como es- pecie distinta. La hemos encontrado en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Ja- maica y la Martinica, recojidas por M. de Candé. № 13. NONIONINA SLOANI[. — (dOrb.) LAM. VI, FIG. 18 y 18 ыз. М№омомімл. Testa oblonga, compressa, nitida, alba, levigata, margine minime incisa; loculis tredecim elongatis arcuatis, subcomplanatis, ultimo supra convexo; suluris minime excavatis. Dimensiones. Diámetro + 1% de millim. Concha oblonga, mui comprimida, mui lisa, brillante, delgada, transparente, frágil, de contorno obtuso, redondeado, tan poco cortado por las cavidades que parece casi entero. Cavidades trece, estrechas, arqueadas, poco distintas ; sin embargo un poco convexas y separadas por mui lijeras depresiones suturales; la última convexa por encima. Ombligo apenas escavado. Color blanco uniforme. Esta especie, vecina de las dos precedentes, es mui comprimida ; las cavidades son mas arquea- das, mas numerosas, menos distintas que en las primeras, mucho mas que en la segunda, sobre todo mas planas en los costados y de borde no carenado; tiene en todo la forma exterior de nuestra CristeLLARIA crepidula sin abertura en el borde carenal. La hemos referido 4 la misma especie que los individuos que hemos encontrado fosiles en las arenas de las cercanías de Dax; en efecto, les es en todo idéntica en el estado de vida; habita en las islas de Cuba y la Jamaica, á pesar de que es rara. FORAMINIFERAS. 69 GENERO 5°. NUMMULINA. — (от.) Nautius, Linn., Gmel.; Camera, Bruguière; NummuLm, LICOPHRE, ROTALIE, Ескоме, Montfort; NummuLITE y LeNTICULINE, Lamarck ; NummuLrrE y Heucrre, Blainville; NummuLixa, d'Orbigny. Concha libre, equilátera, orbicular ó discoidal, comprimida, gruesa. Espira mas ó menos envol- viente y con las vueltas mui aproximadas y numorosas; la última siempre marcada en la juventud, á veces imposible de señalar en la edad adulta. Cavidades pequeñas, cortas, aproximadas, mui nu- merosas; la última haciendo salida en la juventud, mas poco distinta en los individuos viejos. 4ber- tura transversal, linear contra la vuelta de la espira, á veces disimulada en la edad adulta. Relaciones y diferencias. Por el sitio y forma de la abertura bai analogía entre este género y las NonIONIxAS ; pero esta analogía la alejan los demas caracteres. Vemos á las Nonioninas crecer regularmente y mostrar siempre una forma nautiloidea regular, mientras que en la juventud las Nummulinas están carenadas y no redondeadas sobre el dorso ; su crecimiento es tambien mucho menos rápido, y creciendo la última cavidad no hace salida ; es mas corta que las otras á fin de completar el disco perfecto, y al paso que tienen cl mismo modo de enroscarse y la misma abertura que las Nonioninas parecen ser cuerpos mas bien internos que externos como las Foraminiferas, lo que indican las asperezas 6 encostramiento superiores ; sin embargo, habiendo confrontado las especies vivas con los otros géneros de Foraminiferas no hemos encontrado caracter alguno que pueda apoyar la separacion. Dividimos las Nummulinas en tres subgéneros. Í“ SUBGÉNERO. SIDEROLINA. — (d'Orb.) SimErOLITES, Montfort, Lamarck. Vueltas de espira envolvientes en todas edades. Concha en figura de comba provista de apén- dices prolongados al rededor interrumpiendo en lo interior la continuacion de las cavidades. 4ber- tura disimulada. (Морёіѕ, по 89, 4° livraison.) No conocemos mas que dos especies propias de la creta de Maestricht. 10 70 FORAMINIFERAS. 2° SUBGÉNERO, NUMMULINA. — (4'Orb.) Vueltas de espira siempre envolvientes. Concha comprimida sin apéndice en el contorno. Cavi- dades seguidas sin interrupcion. Abertura contra la vuelta de la espira aparente en la juventud. Conocemos muchas especies en la creta, y hasta de una roca cuajada de estas conchas está for- mada la mayor de las pirámides de Egipto. La hemos encontrado tambien en los terrenos terciarios de las cercanías de Soissons. 3" SUBGÉNERO. ASSILINA. — (d'Orb.) Vueltas de espira envolvientes solo en la juventud, despues aparentes sin apéndices en el con- torno. Abertura contra la vuelta de la espira, muchas veces visible. Hemos examinado comparativamente cinco especies de este subgénero, de las cuales dos vivas, una del mar Rojo y otra de Rawack, en el mar del Sur. Las especies fosiles son todas de los ter- renos cretaceos, GÉNERO 6°. OPERCULINA. — (dOrb.) Lewricurres, Basterot. Concha libre, equilátera, oval ó discoidal, mui comprimida. Espira no envolviente, regular, apa- rente lo mismo por cada lado, con vueltas contiguas que crecen rápidamente. Cavidades numerosas, estrechas; la última formando salida de toda la anchura de la espira en todas edades. 4bertura triangular contra la vuelta de la espira, nunca disimulada. (Monñzes, по 80, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. Es evidente que por el sitio de su abertura este género se aproxima al mismo tiempo а las Nomowivas y á las Nummurimas; pero se distingue del primero por sus vueltas de espira siempre aparentes y aplicadas unas contra otras en lugar de ser envolvientes, por su abertura triangular en lugar de ser en hendidura transversal; difiere del segundo por los mismos Caracteres, ademas en que sus cavidades erecen regularmente sin estrecharse cerca de la abertura, como se ve en las Nummulinas y tambien en las Assilinas que se aproximan todavía mas por sus vueltas de espira aparentes en la edad adulta. Poseemos siete especies de este género, tres vivas y cuatro fosiles; las especies vivas, de la Nueva Holanda, de Madagascar y de Cuba; de las tres fosiles una es de los terrenos terciarios de Burdeos, la otra de Dax, la tercera de Montolieu (Aude), la cuarta de las cercanías de Turin. FORAMINIFERAS. 71 № 14. OPERCULINA INCERTA. — ( d'Orb.) LAM. VI, FIG. 16 y 17. OPERCULINA. Testa orbiculato compressa, lateraliter concava, lævigata, Лауеѕсете, margine rotundata; spira regulari, anfractibus octo, cylindricis, suturis excavatis. Dimensiones. Юйтето.............. Oro de parto. cocos Yo de millim. Concha orbicular, mui comprimida, lisa, cóncava por cada lado, con dorso redondeado. Espira mui regular, compuesta de ocho vueltas cilíndricas mui aproximadas, mui estrechas, separadas por suturas profundas. Cavidades : hemos creido notar que habia dos por vuelta de espira, pero no podemos afirmarlo. Color amarillo uniforme. Al colocar esta especie en el género Operculina no lo hacemos con la certidumbre de que esté en su verdadero sitio, porque difiere de todas las demas por su gran número de vueltas de espira. Sus cavidades no tienen la misma forma si es que las hemos visto bien; la gran pequeñez del indi- viduo, su poca transpariencia, nos dejan mucho que desear para conocerla por completo. No des- cribimos por eso esta especie aguardando nuevas observaciones. Я La hemos encontrado en las arenas de Cuba у en las de la Martinica, donde es mui rara. C. Abertura ocupando todo el ancho de la última cavidad. VERTEBRA LI А. — (d'Orb.) Concha libre, regular, mui comprimida, por lo comun inequilátera, mas convexa de un lado que del otro, suborbicular ó prolongada, de una contextura compacta, sin agujeros. Espira envol- viente en la juventud solamente, proyectándose en seguida en línea recta. Cavidades dos ó tres por vuelta de espira antes de proyectarse, terminadas siempre encima por un cerquillo que forma el borde de una sola abertura que ocupa toda la anchura superior. (Monires, по 81, 4° li- vraison.) Relaciones y diferencias. Por sus dos lados desiguales, por sus cavidades tan poco numerosas y tan anchamente abiertas en todo el ancho de la última cavidad, este género no puede ser con- fundido con otro ninguno, y aun podiamos decir que en la familia de las Nautiloideas forma una verdadera anomalía. Todas sus especies están estriadas á lo largo y fuertemente comprimidas. Su aplastamiento de un lado y la inclinacion de la abertura de dicho lado pudieran hacernos creer que estas conchas deben constantemente tener la parte convexa arriba, teniendo el 72 FORAMINIFERAS. animal mas facilidad así para arrastrarse, haciendo salir sus filamentos por la abertura entonces inferior. Conocemos solamente tres especies, todas vivas; la una comun simultáneamente en el Mediter- raneo, en el mar Rojo y en la Oceanía; las otras dos vienen de las Antillas. № 15. VERTEBRALINA CASSIS. — (dOrb.) LAM. ҮП, FIG. 14 y 15. VERTEBRALINA. Testa cassiformi, compressissima, carinata, cultrata, alba; loculis duobus minime convexis, longitudinaliter striatis, margine limbatis, carinatis , postice dilatatis antice truncatis; apertura elongata, late marginata. Dimensiones. Юїйтеїт................ a TE REA Y, millim. Concha de forma irregular representando casi la forma de un casco, fuertemente comprimida y cortante en los bordes. Cavidades dos y ademas solo el reborde de la boca de la tercera, mui comprimidas, orilladas y cortantes en los bordes, lijeramente infladas hácia el medio, estriadas lon- gitudinalmente : cada una es en su perfil redondeada é inflada por detras, estrechada por delante y despues ensanchada en un cerquillo saliente que forma el borde de la abertura. Abertura pro- longada, ocupando toda la longitud de la última cavidad. Color blanco uniforme. Bien diferente de las otras dos especies conocidas por su fuerte carena y aplastamiento general, lo es todavía por las dos únicas cavidades de que se compone, y no parece proyectarse como éstas. Hemos descubierto esta linda especie en las arenas traidas de la isla de Cuba por D. Ramon de la Sagra, y es mui rara. № 16. VERTEBRALINA MUCRONATA. — (20/0. LAM. ҮП, FIG. 16, 17, 18 y 19. VERTEBRALINA. Testa elongata, compressissima, alba; loculis tribus con- vexis, longitudinaliter-costatis, margine rotundata, postice inflatis, antice dilatatis, lateraliter mucronatis; apertura elongata, angustata. Dimensiones. Ютеїто................ 5: Р а з millim. Concha prolongada, comprimida en su totalidad con bordes redondeados no carinados ni cor- tantes. Espira á lo primero enroscada en sí misma, despues proyectada en línea recta. Cavidades tres por vuelta antes de proyectarse, despues coronadas de otras dos cavidades prolongadas sobre una sola línea; convexas en la juventud, comprimidas en la edad adulta, fuertemente costeadas á lo largo; cada una de perfil muestra una hinchazon posterior, despues una pequeña estrechez hácia FORAMINIFERAS. 73 delante seguida de un gran ensanche formado por el cerquillo superior que rodea la abertura, y en su forma arqueada deja por cada lado una gran punta aguda dirijida hácia atras. 4bertura estrecha, prolongad: hada en sus extremidades, estrechada y casi linear en el medio de su anchura. Color un hermoso blanco de leche no transparente. Bastante inmediata а la VERTEBRALIMA striata por su prolongacion en línea recta y por su compre- sion, se distingue fácilmente por sus grandes lados y sobre todo por la salida del cerquillo de la abertura y las puntas que forma lateralmente. Menos rara que la especie precedente, la hemos encontrado en las arenas traidas de la isla de Cuba por el Sr. de la Sagra, lo mismo que en las de la Jamaica, Martinica y Guadalupe, recojidas por M. de Candé, lo que pudiera hacernos creer que es de todas las Antillas. 2: SECCION. Muchas aberturas. 1* DIVISION, Cavidades sencillas con un solo hueco. GÉNERO 8°. POLYSTOMELL./ Naurizus, Linn., Gmel., Auct.; géneros ANDROMEDE, CELLULIE, SPORULIE, Tae- MEONE, PeLoRE, GroroNE, ЁлрнрЕ, Montfort; géneros PoLvsTomELLA, Vor- Ticas, Lamarck, Blainville; PoLysromeLLa, d'Orbigny. Concha libre, regular, equilátera, invariable en sus formas, suborbicular, comprimida y con el dorso frecuentemente carenado. Espira envolviente. Las cavidades de un solo espacio mas ó menos arqueadas ó derechas uniéndose siempre á la vuelta de la espira en el centro umbilical, siempre provistas de fosetas transversales entre las suturas ó sobre ellas. 4berturas numerosas esparcidas en bordaduras ó formando triángulo en la parte superior de la última cavidad mostrándose aun abier- tas en las fosetas suturales de las últimas cavidades. ( МорёгЕз, ne 45, 2° livraison.) Relaciones y diferencias. Las Polystomellas se distinguen de todos los géneros de Nautiloideas de muchas aberturas por este caracter singular que las aberturas del borde de la última cavidad vuelven á aparecer en fosetas mas ó menos prolongadas en todas las otras, las últimas solamente abiertas, las otras cerradas ; resulta que exteriormente este género se distingue en el acto por este gran número de escavacioncitas transversales que se notan en todas las especies. En las Pexerorris, DEeNDRITINA y SPIROLINA nunca se encuentran aberturas laterales en las cavidades ; así es que son lisas ó simplemente estriadas. El animal saca filamentos no solo por las aberturas de encima de la última cavidad, sino tam- bien por los poros de los lados de las últimas cavidades. Conocemos de este género diez y siete especies, de las cuales catorce vivas y tres fosiles; entre Ш 14 FORAMINIFERAS. Jas primeras conocemos dos de las costas del Oceano, en el litoral de la Francia, una propia del Mediterraneo y del Adriático, dos del mar Rojo, una de la Oceanía, dos de Canarias, tres de Patago- nia y cuatro de las Antillas; así se ve que están esparcidas con regularidad en el seno de todos los mares. Las especies fosiles son de los terrenos terciarios subapeninos de Italia, de los falunes de la Turena, y una sola se encuentra en la creta de Chavagne (Maine-et-Loire). № 17. POLYSTOMELLA LANIERI. — (d40rb.) LAM. ҮП, FIG. 12 y 13. РогуѕтомемА. Testa suborbiculata, flavescente, lucida, lateraliter convexa, margine subcarinala; loculis viginti arcuatis, transversim profunde regula- riter costatis, ultimo angulato; suturis complanatis; aperturis numerosis , triangularibus. Dimensiones. Югфтеїто................ 3 puntos... <- h millim. Concha suborbicular, un poco angulosa, mui convexa por cada lado, con el contorno un poco carenado, sin cortadura ; parte umbilical convexa, sin disco. Cavidades veinte y aun mas, estrechas, arqueadas, provistas de quince á diez y seis fosetas transversales lineares, siguiendo de una cavidad á otra una línea oblicua al enroscamiento espiral ; suturas no salientes; la última cavidad truncada, angular. Abertura cerca del borde formando los dos lados de un triángulo. Color amarillento. Vecina por su forma angular de la PoLysromeLLa angularis, difiere por la falta del disco um- bilical y por un grueso mayor; las fosetas en líneas de sus cavidades las distinguen tambien. Hemos encontrado esta especie en la arena traida de la isla de Cuba por el Sr. de la Sagra. N° 18. POLYSTOMELLA SAGRA. — (d'Orb. LAM. VI, FIG. 19 y 20. PorxsromeLLa. Testa suborbiculato-convexa, lucida, alba, margine rotun- data, integra; loculis tredecim arcuatis, transversim profunde striatis ; striis interruptis, suturis complanatis. Dimensiones. Юте+то............... 2 puntos... +. з de millim. Concha suborbicular, no angulosa, convexa por cada lado, con el contorno redondeado, ente- ro; parte umbilical sin disco y poco distinta. Cavidades trece, bastante anchas, arqueadas, provistas FORAMINIFERAS. 75 al traves de estrias ó pequeñas fosetas estrechas, ocupando una pequeña parte de la anchura de cada cavidad y sirviendo solas para distinguirla no teniendo entre sí ninguna sutura marcada; estas fosetas cerca de la vuelta de la espira forman estrias continuas y oblicuas de una cavidad á otra ; la última cavidad bastante plana por encima. 4berturas en dos líneas formando los dos lados de un triángulo. Color blanco uniforme. Mas vecina de la precedente que de otra ninguna por la falta de salidas entre las cavidades y por su forma poco angular, se distingue sin embargo por menos cavidades, por un contorno mas redondeado, por estrias transversales no ocupando mas que una partecita y formando estrias con- tinuas hácia la vuelta de la espira. La hemos descubierto en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra: es rara. № 19. POLYSTOMELLA POEYANA. — (d40rb.) LAM. VI, FIG. 25 y 26. PoLystOMELLA. Testa suborbiculata, compressa, alba, nitida, punctata, margine inflato-rotundata; loculis undecim non arcuatis, convexis, levi- gatis, ultimo convexo; suluris articulatis; umbilico subexcavato, aperturis numerosis. Dimensiones. Рійтеѓто........ ..... ООН оэ рса 'з de millim. Concha suborbicular, comprimida, lisa, brillante, punteada finamente por todas partes, de con- torno inflado, mas ancho que lo demas, mui redondeado, entero hácia la vuelta de la espira, di- vidido apenas un poco por las salidas de las últimas cavidades ; parte umbilical, cóncava sin disco. Cavidades once bastante convexas, no arqueadas, lisas ; cada sutura marcada por una quincena de pequeñas fosetas transversales aproximadas; la última cavidad convexa por encima. Aberturas mui pequeñas colocadas en líneas sobre el contorno de la última cavidad y contra la vuelta de la espira. Color blanco uniforme. A primera vista se encuentra mucha analogía entre esta especie y la PoLystomeLLA articulata de Patagonia, pero se distingue por su contorno mas inflado, menos comprimido y casi entero, por sus cavidades no arqueadas, por sus fosetas mas aproximadas y por sus aberturas. La hemos descubierto en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Jamaica. 76 FORAMINIFERAS. N° 20. POLYSTOMELLA DISCOIDALIS: — (4 Orb.) LAM. VI, FIG. 23 y 24. PoLystomtLLA. Testa suborbiculata, discoidali › compressa, alba, nitida, punctata, margine subcarinata, non integra; loculis decem arcuatis, conve- xis, levigatis, ultimo convexo; suturis excavatis, articulatis; umbilico dis- coidali, convexo; aperturis numerosis. Dimensiones. Diámetro оаа % de millón. Concha discoidal, comprimida, lisa, brillante, finamente punteada, con el contorno un poco ca- renado, dividido en festones por las cavidades; parte umbilical convexa, adornada de un disco distinto un poco rugoso. Cavidades diez, poco convexas, arqueadas y casi planas en los costados, salientes en la carena; cada sutura formando un cerquillo sobre el cual están al traves nueve б diez fosetitas poco distintas hácia la vuelta de la espira ; la última cavidad convexa por encima. Abertura pequeña, colocada sobre el contorno de la última cavidad y contra la vuelta de la espira. Color blanco uniforme. Aunque tiene muchas relaciones con la precedente por las fosetas de sus suturas, esta especie se distingue por su dorso comprimido y un poco convexo, por su disco umbilical, por sus cavi- dades arqueadas, por el cerquillo sutural y por menor número de fosetas. 4 Esta linda conchita es bastante comun en las arenas de la isla de Cuba y de la Jamaica: es ex- tremadamente frágil. GÉNERO 9°. PENEROPLIS. — (Мот/от.) Género Naurius, Linn., Gmel.; Рехекориѕ, Montfort, Blainy.; CRISTELLARIA, Rexurtres, Lamarck; Resurixa, Віаїпу. Concha libre, regular, equilátera, comprimida, con el dorso poco carenado, mui variable en sus formas segun la edad ó los individuos. Espira envolviente en la juventud, muchas veces proyectada mas adelante. Cavidades de un solo hueco, arqueadas, comprimidas, no uniéndose siempre al centro umbilical, nunca acribilladas de fosetas transversales frecuentemente estriadas. Aberturas nume- rosas esparcidas en líneas longitudinales ó das, abiertas sol de la última cavidad. en la parte superior Relaciones y diferencias. Las Peneroplis prov istas como las Polystomellas de muchas aberturas y de cavidades compuestas de un solo hueco, se distinguen por su forma de la mas variable segun las edades y los individuos de ciertas especies, proyectándose á menudo en línea rect а, por su con- textura delgada y sobre todo porque en lugar de tener aber turas en la parte superior de la última FORAMINIFERAS. 17 cavidad y aun en los lados de las otras, no las tienen mas que en la parte superior de la última y ninguna en los costados ; así nunca tienen las fosetas características de las Polystomellas. Las dividimos en tres subgéneros que hemos considerado como géneros en nuestro cuadro de los Cephalopodes en 1825 (las Dexorrriva, las Рехеһориѕ y las SerroLiva), en las cuales ahora encon- tramos tanta analogía que no creemos deban separarse unas de otras ciertas especies que nos muestran solas todos los caracteres generales de las tres divisiones en su grande variacion de edad. 1° SUBGÉNERO.. DENDRITINA. — (d'Orb.) Concha poco variable en sus formas, regularmente envolviente. 4berturas reunidas en ramos mas б menos ramificados, representando una dendrita. (Mopères, по 21, 1те livraison.) Hemos réunido las Dendritinas á las Peneroplis, porque considerándolas con reflexion se reco- noce que las dendritas de la boca, á menudo variables en su forma, no son en último análisis mas que aberturas, muchas de las cuales se han reunido por anastomosacion y han formado ar- bustos ; por otra parte estas ramificaciones no están siempre bien formadas, y algunas anuncian el paso á las aberturas separadas de las Peneroplis propiamente dichas. No conocemos mas que cuatro especies de este género, dos vivas y dos fosiles ; de las dos pri- meras una es del Mediterraneo y otra de las Antillas ; de las especies fosiles una es de los terrenos terciarios de las cercanías de Burdeos y la otra de Buitur, cerca de Viena (Austria), comunicada por el Señor Consejero de Hauer. № 21. DENDRITINA TILLARUM. — (dOrb.) LAM. ҮП, FIG. 3, 4, 5 y 6. Dexoririsa 4ntillarum, d'Orbigny, 1825, Tableau méth. des Céph., р. 119, п. 3. Denpritisa. Testa suborbiculato-compressa, alba, vel ccerulescente, umbi- licata, margine subcarinata, non integra; loculis tredecim arcuatis, minime convexis, transversim profunde siriatis; ullimo subconcavo; suturis excava- tis; aperturis numerosis , distinctis. Dimensiones. Diámetro, . ACE НОЕ 1, millim. Concha suborbicular, comprimida, lateralmente frágil, transparente, con el contorno un poco anguloso, casi carinado, dividido en lijeros festones por la salida de las cavidades ; parte umbilical cóncava y bastante ancha. Cavidades en número de trece, arqueadas, estrechas, un poco convexas, profundamente separadas por anchas suturas, mui estriadas al traves en toda su longitud; la últi- ma cavidad un poco cóncava; ombligo ancho y poco profundo. Aberturas numerosas no formando un arbusto completo sino muchas partes en Y separadas cuya punta se dirije hácia el centro, en medio de las cuales hai aberturas contorneadas ó sencillas. 12 78 FORAMINIFERAS. Bastante vecina de la Desbrrriva arbuscula, fosil de Burdeos, por su forma y por sus estrias, esta especie se distingue principal por las ramifi de la boca siempre incompletas en lugar de formar un arbusto ó una dendrita completa. No la hemos encontrado mas que en la arena de la isla de Cuba, donde es rara, 2° SUBGÉNERO. PENEROPLIS. — (“'Orb.) Concha mui comprimida, mui variable en sus formas, por lo regular envolviente solo en la ju- ventud, despues dilatada ó proyectada, pero de un modo no constante. Aberturas numerosas, sepa- radas en una ó muchas líneas longitudinales. (MoniLes, по 16, 1° livraison y пе 48, 11* livraison.) Es evidente que en muchas de las innumerables variedades de formas que afectan ciertas espe- cies de este subgénero encontramos algunas veces la forma prolongada de las Spirolinas; pero esta prolongacion по es mas que accidental, porque la misma especie se contornea al propio tiempo en una ancha superficie, mientras que en las Spirolinas el único cambio de forma que tienen las especies consiste en prolongarse y proyectarse en línea recta á cierta edad. Hemos examinado comparativamente once especies de este subgénero, ocho vivas y dos fosi- les: en las primeras tenemos una del Mediterraneo y del mar Rojo, una de las islas Sandwich, una de Rawack, una de la isla de Santa Elena, dos de Patagonia y tres de la isla de Cuba en las An- tillas : de las dos especies fosiles, una es del terreno terciario de Dax y la otra de Paris. N° 22. PENEROPL S PROTEUS. — ( d'Orb.) LAM. ҮП, FIG. 7, 8, 9, 10 y 41. Pexeroptis. Testa variabili, compressa, alba, umbilicata, margine rotun- data; loculis augustatis, lævigatis arcuatis, minime convexis , ито compla- nato; suluris excavatis; aperturis numerosis lineatis. Dimensiones. Diámetro.. ............ E EE TNE i millim. Concha mui comprimida, mui frágil, transparente, mui variable en su forma; en la juventud representando un nautilo comprimido, umbilicado, regular, despues ensanchándose en forma de casco ó proyectándose al mismo tiempo que se ensancha de modo que se hace flabeliforme : la es- pira entonces no siendo mas que una pequeña parte, su contorno es redondeado y lijeramente cor- tado por las cavidades. Cavidades variables en número, estrechas, arqueadas, mas ó menos largas, mui lisas, un poco infladas, mui separadas por las suturas; parte superior de la última cavidad un poco cóncava. Aberturas mui numerosas, redondas, colocadas en una sola línea longitudinal en medio de la anchura de la última cavidad. Color blanco uniforme. Casi tan variable en sus formas como el PexerorLis planatus del Mediterraneo, pues que se en- sancha tambien y se proyecta en línea recta como ella, se puede no obstante reconocer inmedia- FORAMINIFERAS. 79 tamente por sus cavidades lisas y no estriadas transversalmente, caracter constante en todos los individuos. Lejos de ser en las Antillas tan comun como el PenerorLIs planatus en el Mediterraneo, ésta es mui rara en Cuba y la Jamaica, las dos únicas islas en cuyas arenas la hemos encontrado. № 23. PENEROPLIS ELEGANS. — (40rb.) LAM. VII, FIG. 1 y 2. Prxeropnis. Testa suborbiculato-compressa, alba vel coerulescente, fragili, translucida, margine rotundata, non integra, umbilico magno; loculis unde- cim minime arcuatis, canvexis, profunde transversim striatis; suturis ex- cavatis; aperturis sparsis. Dimensiones. Ю@тето.,............ A ОЬ раа 15 de millim. Concha suborbicular, comprimida, mui frágil, transparente, de ningun modo variable en su for- ma, su espira no envolviente mostrándose la mitad en un ombligo mui ancho, el contorno no ca- rinado, lijeramente anguloso, un poco cortado por la salida de las cavidades. Cavidades once, bas- tante anchas, un poco arqueadas y demasiado convexas, con grandes y mui regulares estrias al traves, separadas por anchas suturas bastante cóncavas ; la última cavidad plana ó un poco convexa. Aberturas redondas en número de seis á siete en dos líneas en medio de lo ancho de la última ca- vidad. Color blanco ó blanco azulado, las suturas y la vuelta umbilical teñidas de azul mas subido. Por su ancho ombligo, esta especie se aproxima al Рехекориѕ ellipticus de la Nueva Holanda, distinguiéndose al mismo tiempo por su forma mucho mas regular, por menos compresion, por su borde de los mas angulosos y en fin por su espira mas aparente en el ombligo. Hemos descubierto esta linda especie en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra, y en la de la Jamaica, recojida por M. Fernando de Candé : es mui rara. No 24. PENEROPLIS DUBIUS. — (d'Orb.) LAM. VI, FIG. 21 y 22. PexeropLis. Testa orbiculato-convexa, alba, crassa, margine subcarinalo- gradata; umbilico nullo; loculis octo vel decem arcuatis, complanatis, lcevi- galis; suluris marginatis ; aperturis numerosis, lineatis, triangularibus. Dimensiones. Diámetro. ...........o... ПДО 1/5 de millim. Concha orbicular, mui convexa por cada lado, gruesa, invariable en su forma de espira envol- viente, contorno anguloso casi carinado, representando gradillas por la pequeña salida de las ca- vidades unas sobre otras: nada de ombligo. Cavidades ocho á diez, un poco arqueadas, planas, 80 FORAMINIFERAS. sobresaliendo solo por detras unas sobre las otras, mui lisas, señaladas con un ribete en la sutura; la última cavidad cortada en cuadro por encima. Aberturas redondas, bastante numerosas, en una línea y formando un triángulo arqueado en su totalidad siguiendo la forma de la última cavidad. Por su gran convexidad en el centro umbilical, por el envolvimiento entero de las espiras y por la falta de estrias, esta especie tiene relacion con nuestra Pexeropis Gaimardii de las islas Maria- nas; pero se distingue por su carena menos pronunciada, por sus lados mas inflados y por sus ca- vidades menos arqueadas y mas salientes. La hemos llamado Peneroplis dudosa, porque exami- nando con cuidado las jóvenes Orbiculinas hemos creido а lo primero encontrar algunas relaciones de formas; sin embargo, creemos estar ciertos de que son dos especies bien distintas. 3° SURGÉNERO. SPIROLINA. — (Lamarck.) SPIROLINA y LrruoLrrES, Lamarck; SrrruLiva y Lrruorte, Blainville. Concha comprimida ó no, variable segun la edad; jóven es nautiloide, con vueltas envolvientes б no, mui regulares; despues á cierta edad se proyecta siempre regularmente en línea recta y representa entonces un cayado. 4berturas numerosas en la juventud, á menudo únicas en la edad adulta. Las Spirolinas son comparativamente á las Peneroplis conchas menos variables en su creci- miento, prolongándose regularmente en línea recta: esta prolongacion que no es accidental es la única modificacion habitual de las especies que no se dilatan nunca como las Peneroplis. En la juventud pueden ser solamente confundidas con los dos subgéneros precedentes que tienen enton- ces las aberturas semejantes. Conocemos ocho especies, de las cuales siete fosiles ; una viva del mar Rojo, seis de los terrenos terciarios de las cercanías de Paris y una en la creta blanca del depósito de Paris. 2: DIVISION. Cavidades compuestas, divididas en compartimentos. GENERO 10. ORBICULINA. -— (Lamarck.) Géneros Hrrenme, Авснїш® é поте, Montfort; ORBICULINA, Lamarck, Blain- ville, d'Orbigny. Concha discoidal, libre, regular, equilátera, mui comprimida, mui variable segun la edad, en- FORAMINIFERAS. 81 roscándose en espiral envolviente y mui regular en la juventud, despues ensanchándose de modo que forma un disco mas ó menos perfecto en edad mas avanzada. Cavidades divididas en toda su longitud en una multitud de cavidades mas peq distinguiéndose por separaciones perpendi- culares y transversales al enroscamiento espiral. Estas cavidades son todas mui estrechas, arquea- das, á menudo circulares еп los adultos. 4berturas en gran número, redondas, esparcidas, en líneas longitudinales al enroscamiento. Relaciones y diferencias. Si no se considerase mas que la forma exterior, el modo de crecer y las aberturas, es positivo que las Orbiculinas debian entrar en el género Ремекориѕ , pues como estas conchas, cambian en el modo de crecer y seensanchan en disco á cierta edad; pero el inte- rior de sus cavidades las distingue claramente. En lugar de ser formadas de un solo hueco, cada una de ellas está dividida en un gran número de celdillas por separaciones multiplicadas á mas no poder; así las Orbiculinas para nosotros no som mas que Peneroplis con las cavidades divididas. Fichtel y Moll en 1803 describieron los primeros una especie de este género, que colocaron en el género Naurius; mas habiéndose hecho poco cargo de las modificaciones que la edad intro- duce en las formas, establecieron tres especies : la mas jóven fué su Naurizus angulatus, la jóven su Naurus orbiculus y la adulta el Naurizus aduncus, de los cuales segun su exageracion ordi- naria Montfort hizo tres géneros: el mas jóven fué su Arcmaias spirans, el jóven su [отв rota- litatus y el adulto su Exums spatosus, y véanse aquí tres edades de una misma concha erijidas primero en especies y despues en géneros distintos. Lamarck que tal vez no conocía estas con- chas mas que por Fichtel y Moll formó el género OrsicuLisa y colocó las tres especies de estos autores cambiando dos de los nombres específicos. М. de Blainville adoptó el género OrrrcuLixa y las tres especies de Fichtel. Cuando nos ocupamos del trabajo general acerca de las Foramini- feras reconocimos que las tres especies de estos autores debian pertenecer á una sola, y las hemos reunido en nuestro cuadro presentado en 1825 á la Academia de ciencias. Hoi dia conocemos dos especies de este género, ambas vivas y propias de las Antillas; sin em- bargo, una de ellas se encuentra tambien en la India y en las islas Marianas. No 25. ORBICULINA ADUNCA. — (£Lam.) LAM. ҮШ, Fic. 8 а 16. MUI JOVEN. Nautilus angulatus, Fich. y Moll, 1803, Test. mic., р. 113,1. 22. — Archaias spirans, Montfort, 1808, Conchyl. syst., género 48, p. 191. — Orbiculina angulata, Lamarck, 1822, Anim. sans vert, VIL, p. 609. — Orbiculina angulata , Lamarck, 1822, Encyclop. méth., pl. 468, p. 3, a, b, c, d (copie de Fichtel). — Orbiculina angulata , Blainville, 1825, Malacologie, р. 114. JOVEN. Nautilus orbiculus, Fichtel y Moll, 1803, р. 112, fig. 21. — Notes rotalitatus, Montf., 1808, Conch. syst., género 50, p. 198. — Orbiculina nummata, 82 FORAMINIFERAS. Lamarck, Encycl. méth., pl. 468, fig. 1 (copie de Ficht.) — Orbiculina numismalis, Lamarck, 1822, An. sans vert., t. VIL, р. 609, п" 1. — Orbi- culina nummata, Blainy., 1825, Malac.; p. 373. ADULTA. Nautilus aduncus, Ficht. y Moll, 1803, p. 115, t. 23, — Elenis spatosus, Montfort, 1808, p. 194, género 49. — Orbiculina adunca, Lamarck, En- cycli. méth., pl. 468, fig. 2 (copie de Ficht.) — Orbiculina uncinata, Lamarck, 1822, л. sans vert., t. VIN, p. 610, n° 3. — Orbiculina adunca , Blainv., 1825, Malac., p. 372. TODAS LAS EDADES REUNIDAS. Orbiculina numismalis, d'Orbigny, 1825, Tabl. méth. des Céph., p. 139, n° 1. Junior. Testa variabilis orbiculato-angulata lateraliter convexa, margine integra, carinata; loculis angustatis arcuatis, suturis convexis. ADULTA. Testa orbiculato-compressa , subdiscoidali , alba, margine iruncata; loculis arcuatis ; aperturis numerosis , sparsis. Dimensiones. Югйте{то.............. SS АА - 344 millim. Concha mui variable; jóven, orbicular, convexa, angulosa, representando un pequeño nautilo mui regular, con el contorno mui carinado, mui convexo en el centro, formado de cavidades es- trechas, arqueadas á mas no poder, no divididas en lo exterior, con suturas poco salientes; la úl- tima cavidad truncada, triangular, horadada por un gran número de aberturas redondas en líneas longitudinales ó esparcidas. 4dulta, las cavidades abandonan poco á poco el enroscamiento envol- viente de las jóvenes, se prolongan mas en la extremidad superior de modo que forman mas adelante una superficie casi circular que se completa algunas veces, y entonces las cavidades reuniéndose en la extremidad forman un disco perfecto representando cada una un círculo entero. Aberturas mui numerosas en el cortante de la cavidad y а menudo esparcidas. Color: las jóvenes son algunas veces violadas ó rojizas, pero adultas generalmente son blancas. Esta especie notable por las mudanzas de forma que tiene segun la edad, puesto que sus cavi- dades se desprenden y se proyectan á veces en línéa recta, se distingue de la siguiente por mas convexidad, por una juventud del todo diferente y porque solo rara vez forma disco, mientras que la otra lo forma siempre. Constituye muchas variedades locales. En Cuba, donde es mui comun, es siempre Convexa, permanece siempre oval y sus cavidades nunca forman disco. En la Martinica y Guadalupe es tambien comun, pero un poco mas comprimida, y permaneciendo siempre de un tamaño mediano FORAMINIFERAS. 83 es sin embargo completa y rara vez llega al disco. En Santo Tomas y la Jamaica es mayor, con- servando las mismas formas. Por esto se ve que se halla en todas las Antillas; tambien la hai de la India é islas Marianas. № 26. ORBICULINA COMPRESSA. — (d'Orb. LANM. ҮШ, FIG. 4 å 7. Junior. Tesia ovato-compressa, lateraliter compressa, subplana, margine rotundata, non integra; loculis angustatis, arliculatis, convexis, suturis excavatis. ADULTA. Testa orbiculata, compressissima, discoidali, alba, margine truncata; aperturis numerosis linearibus. Dimensiones. Ю@тето............... E P I ON 2 а 3 millim. Concha variable en su forma; mui jóven, oval ú oblonga, plana, no angulosa , representando un nautilo mui comprimido, poco regular, aplastado por los dos lados, con el contorno redondeado, no carenado, cortado por la salida de las cavidades ; éstas estrechas, mui arqueadas, divididas por segmentos en lo exterior, todas convexas, de suturas profundas; la última convexa y prolongada del mismo diámetro en toda su longitud. Aberturas en una sola línea. Adulta, sus cavidades aband br el enr espiral envolviente ; pasada la juventud se enroscan al instante en círculo al rededor del eje; continuan así, forman siempre un círculo completo todo el tiempo de la existencia del animal y representan entonces un disco per- fecto mui comprimido, mui sutil, en el centro del cual se nota la primera edad espiral. Aberturas mui numerosas, redondas y en una sola línea. Color blanco, azulado ó violaceo. Esta especie difiere esencialmente de la precedente por su juventud totalmente distinta en to- das sus partes y porque lejos de permanecer casi siempre hasta la edad mas avanzada mas en- sanchada sin formar disco, ésta no se enrosca en espiral mas que en la primera juventud, y sus cavidades forman mui temprano un círculo perfecto que se continua despues en todo el resto del crecimiento. Esta linda concha especialmente propia hasta el dia de las Antillas, está esparcida en casi todas estas islas ; sin embargo, es rara en Cuba y poco comun en Guadalupe y Santo Tomas, mientras que se encuentra abundantemente en la Jamaica. 84 FORAMINIFERAs. GÉNERO 11. ALVEOLINA. — (dOrb.) DiscoLrres, Fortis; Naurimus, Fichtel y Moll; ALvroLtres, Bosc; Воккик, CrausuntE, Miorre, Montfort; Merosm, Lamarck, Blainville; ORIZARIA, Defrance; ArvroLiva, d'Orbigny. Concha libre, regular, equilátera, redondeada, oblonga ó prolongada en el sentido del eje, no variable en su crecimiento. Espira envolviente en todas edades y mui regular, las vueltas fre- cuentemente aproximadas. Cavidades poco numerosas, prolongadas transversalmente, divididas en un gran número de cavidades capilares por separaciones longitudinales al enr i dber- turas redondas, numerosas en líneas transversales al enroscamiento. Relaciones y diferencias. Este género, cuyas cavidades están divididas en segmentos por las separaciones como en las OrsicuLmma, es en todo opuesto por sus formas : en efecto, es prolongado en sentido del eje, mientras que las Orbiculinas están mui comprimidas y aplastadas en el mis- mo sentido. Resulta que en el primero las cavidades están prol das transversalmente al eje, mientras que en el segundo dan vueltas al rededor; que las separacioncitas de las cavidades son en éste longitudinales al enroscamiento en lugar de ser transversales, y que las aberturas están tambien en líneas transversales al eje en vez de ser longitudinales; así aunque aproximados en sus detalles estos dos géneros, no pueden ser mas distintos en sus caracteres.. No encontramos hecha mencion anterior á las de Fortis! y Delue?, publicadas en 1802. El primero los confundió соп los Nummurrres y los llamó Discotrres. El año siguiente Fichtel y Moll”, reprodujeron el género, pero á imitacion de Linneo y Gme- lin, que clasificaban todas las conchas politálamas en el género Naurmus, le describieron con este nombre. Bosc * reconociendo la diferencia que existía entre estas conchas y los Nautilus ó entre ellos y los Nummulites, formó en una memoria especial un género distinto con nombre de Ar- veorItes; desgraciadamente en aquella época los autores poco celosos de enterarse de los trabajos de sus predecesores y sobre todo de los nombres ya impuestos, embrollaron como á porfía las co- sas imponiendo nuevas d inaci Montfort * en 1808 no hizo, lo mismo que por los demas géneros de Multiloculares, caso ninguno del género сгеайо por Bosc y formó uno nuevo para cada especie conforme lo habia hecho con las variedades de edad de las Orbiculinas y estableció su Borers, CrausuLtes y Милогткз. М. Duvernoy ° confundió las ALveoLrres de Bose, con el género ArvroLrres de Lamarck, compuesto de Polyperas solamente, lo que no ha rectificado M. De- france 7 en su suplemento á la misma obra. М. de Lamarck еп 1812* no solo по se hizo cargo ninguno de los géneros de Montfort, co- mo lo ha hecho en todas las obras de este autor, sino que sin citar á Bose dió á este género el nombre de МегохтА, ya empleado para otras conchas por Montfort, introduciendo por este doble * Mémoires pour servir à Phistoire naturelle de l'Italie, * Conchyliologie systématique. 1.2, p. 112, © Dictionnaire des sciences naturelles, t, I. 2 Jonrnal de physique, año X. vol. 54, р. 179. 7 Supplément, р. 136. 3 Testacea microscopica, ete. * Extrait de son cours, * Bulletin des sciences de la société philomathique , n° 61. FORAMINIFERAS. 85 empleo un manantial de errores en los cuales ha incurrido á menudo por sus nombres de género; sin embargo, la denominacion de Lamarck fué adoptada por Cuvier y por Ferussac que reunieron los tres géneros de Montfort. En 1820, M. Defrance* publicando su artículo fabulaire propuso to- davía para estas conchas un nuevo nombre, el de Orwanza, sin referirle al género MeLonta de Lamarck. Lamarck en sus Animaus sans vertèbres en 1822 mo cambió mada de cuanto habia dicho en el extracto de su curso. Lo mismo que M. Deshayes, M. Blainville conservó el nombre puesto por Lamarck. Tal era el estado de las cosas cuando terminábamos nuestras primeras investigaciones generales sobre las Foraminiferas. Hemos reconocido este caos y procurado desembrollarle; entonces recu- riendo al primer nombre de ALvroLrrrs, al que sustituimos el de AnvroLisa habiendo descubierto una especie viva, condenamos todos estos géneros inútiles indicándolos solamente como sinónimos en nuestro cuadro metódico de los Cephalopodes (1825), en el que hemos dado la sinonimia exacta de las especies multiplicadas mas de lo regular y rectificado la historia de cada una añadiendo mu- chas nuevas, entre otras una viva, hecho desconocido antes de nosotros. Dos años despues de la publicacion del Prodromo de nuestro trabajo, M. Deshayes en una memoria especial sobre las Alveolinas no solo reprodujo las reuniones de géneros de los autores indicados por nosotros, sino que dió tambien la descripcion de cinco de nuestras especies publi- cando la sinonimia que habiamos aplicado á cada una de ellas; solo este naturalista explicó lo que nosotros solo habiamos presentado en compendio, como lo exijía por lo demas el límite que habiamos adoptado para nuestro cuadro, no pudiendo publicar entonces nuestro trabajo general sobre las Foraminiferas. Hemos observado comparativamente ocho especies de este género, de las cuales dos vivas y seis fosiles; de las primeras, una es de Nueva Holanda y la otra de la isla de Cuba en las Antillas. De las otras seis, tres pertenecen á los terrenos terciarios del depósito de Paris y de Dax y tres son propias de las capas cretaceas. № 27. ALVEOLINA PULCHRA. — (d'Oró.) LAM. ҮШ, FiG. 19 y 20. AL versim striatis; suturis subplanis; aperturis serie unica dispositis. VEOLINA. Testa spheerica, crassa, alba, rugosa; loculis quinque, trans- Dimensiones. Юте{то.............. 1 риио......... ++... 16 de millim. Concha esférica y globulosa, gruesa, bastante rugosa, con el dorso perfectamente redondeado, sin ombligo. Cavidades de cinco á cinco y media en la última vuelta, anchas, angulosas en su extremidad. Están estriadas al traves, las estrias espaciadas se continuan de una cavidad á otra y representan un surco bastante profundo, sobre todo cerca de la vuelta de la espira; las suturas son lineares apenas visibles. Aberturas redondas en una sola línea transversal al enroscamiento espiral, cada una en una fosetita correspondiendo á cada surco exterior. Color blanco uniforme. Mas esférica todavía que la ALveoLivamelo y la A. bulloides, esta especie tiene casi la misma forma exterior ; no obstante, se distingue de la primera por menor número de cavidades, por vueltas de Y Dictionnaire des sciences naturelles. 86 FORAMINIFERAS. espira y porque está estriada en vez de ser lisa; se distingue de la segunda por sus cavidades menos numerosas, no abombadas y estriadas por todas partes, mientras que la A. bulloides no está estriada mas que hácia la vuelta de la espira; todavía se diferencia por su sola hilera de aber- turas, mientras que la otra tiene tres. La hemos encontrado en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr, de la Sagra, y es rara. 2: FAMILIA. TURBINOIDAE. — (4O7b.) Concha libre, mas ó menos regular, inequilátera. Espira enroscada obli- cuamente, y por lo tanto mas saliente y aparente de un lado que de otro. Con- textura vitrea por lo regular, y perforada de agujeritos. 1* SECCION. Forma igual en todas edades; espiral siempre completa. 1* DIVISION. Una sola abertura. A. Espira trochoide б rebajada. GÉNERO 12. ROTALINA. — (d'0rb.) Roranta, Lamarck. Concha libre, deprimida ó trochoide, finamente perforada y carenada por lo regular. Espira deprimida, truncada ó cónica. Cavidades deprimidas, frecuentemente carenadas. Abertura en hendidura longitudinal contra la penúltima vuelta de espira no ocupando mas que una parte de la última cavidad. Relaciones y diferencias. Este género que por su forma exterior pudiera confundirse con las Rosalinas y las Truncatulinas, se distingue no obstante por caracteres bien marcados : de las primeras, por su abertura contra la vuelta de la espira y solo exterior en la última cavidad en lu- gar de ser en el ombligo y continuarse de una cavidad á otra; de las segundas, en que esta abertura no es continua por el lado de la espira. Difiere de las Globigerinas en que en éstas las cavidades son globulosas y que la abertura está en el ángulo umbilical en lugar de estar en el lado de la cavidad. FORAMINIFERAS. 87 Segun la exposicion de estos caracteres no podemos conservar mas como géneros distintos las Gyroidinas y las Calcarinas, teniendo las primeras en todo las mismas disposiciones de abertura y solamente la espira truncada, y las segundas de abertura j no distinguiéndose mas que por los apéndices de su contorno. Creemos por tanto que no debemos dividir las Rotalinas mas que en dos subgéneros: 1° las Котлтлхлѕ propias en las que entran por completo nuestras GvrorD1- Nas; 20 las CALCARINAS. 1" SUBGÉNERO. ROTALINA. — (d'Orb.) Contornos generalmente desprovistos de apéndices marginales con disco central ó sin él. (Mo- DBLES, д9 10, 12, 13, 1т° livraison; 35, 36, 2° livraison; 71, 72, 73, 3e livraison.) Conocemos hasta la presente de este numeroso género cincuenta y tres especies, de las cuales veinte y siete vivas, entre ellas diez del mar Adriático, siete de las Antillas, seis de las Canarias, dos de Patagonia, una del Perú, una de la India, una de Madagascar, una de la isla de Santa Elena y una de la isla de Francia. Las especies fosiles son diez y nueve de los terrenos tercia- rios, y de ellas once del déposito parisiense, siete del de la Gironda y una de la Italia. En la creta hemos descubierto siete, de las cuales cuatro de la creta blanca de Paris, una de la del de- partamento de Maine-et-Loire y las demas de Maestricht. 1° SECCION. Un disco umbilical. N° 28. ROTALINA ROSEA. — (d'0rb.) LAM. Ш, FIG. 9-11. RoraLisa rosea, d'Orb., 1825, Tabl. des Céph., р. 106, ne 7. (MopkLEs, по 35, 2e livraison.) ‚ Roraima. Testa orbiculato -conica, trochiformi, subcarinata , punctata rosea vel rubra, subtus convexa; spira elevata, conica, apice obtuso , anfractibus tribus, non distinctis. Loculis ultimis subconvexis, obliquis, carinatis. * Dimensiones. Didmelro ................ Ian rr oa 1), millim. Concha orbicular, trochiforme, elevada, mas ancha que alta, un poco carenada en los bordes, mui convexa por encima y poco por debajo, cubierta de agujeritos irregularmente colocados, mas 88 FORAMINIFERAS. visibles en las últimas cavidades. Espira elevada, cónica, соп la cúspide mui obtusa, compuesta de tres vueltas poco distintas, sin suturas marcadas. Cavidades en número de ocho en la última vuelta, todas carenadas, las últimas solamente distintas, las otras apenas indicadas por fuera ; por encima son oblicuas, las cuatro últimas un poco convexas ; por debajo tienen las suturas radiando en ángulo recto del centro á la circunferencia juntándose al ancho disco umbilical convexo que adorna el centro; la última un poco angulosa en la boca. 4bertura en hendidura sobre la ül- tima cavidad. La espira se contornea indiferentemente á derecha ó izquierda. Color de rosa vivo б rojo de carmin mas subido en la extremidad de la espira. Esta linda especie ademas de distinguirse de las otras por su bella tinta roja, difiere tambien por su disco umbilical y por su forma trochoide y cónica. La hemos encontrado abundantemente en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, bastante comun en las de la Martinica, Guadalupe, Santo Tomas, Jamaica y Haiti, traidas por M. Fernando de Candé. A veces es tan comun que la arena toma una tinta rosada, debida únicamente al gran número que contiene 2: SECCION. Sin disco umbilical. № 29. ROT LINA CARIBAEA. — (d07b.) LAM. V, FIG. 1-3. Roranina. Testa ovali, depressa, supra sublusque cequaliter convexa, ru- gosa, carinata; spira convexiuscula, conica, anfractibus duobus subplanis; loculis octo obliquis, carinatis, supra limbat > > , subtus simplicibus, ultimo carinato; apertura elongata. Dimensiones. Ю@тето................ Зеро a millim, Concha ovalada, deprimida, convexa igualmente por los dos lados, fuertemente carenada en su contorno, un poco rugosa y punteada. Espira mui poco elevada, cónica, compuesta de dos vueltas creciendo rápidamente sin dejar suturas cóncavas; éstas marcadas exteriormente por un reborde. Cavidades ocho á nueve en la primera vuelta, todas mui сагепайаѕ, angulosas, oblicuas y un poco arqueadas; por encima están mui bordeadas en las suturas por un roborde elevado ; por debajo son sencillas, la última mui angulosa en la boca: nada de disco umbilical; esta parte es con- vexa, formada por la juntura de las cavidades. 4bertura en forma de media luna al medio del ancho de la última cavidad sobre la vuelta de la espira. Color blanco uniforme. Esta especie se parece mucho á la Rorarisa communis y å la А. deformis por su forma carenada y su falta de disco umbilical; pero difiere de la primera en que sus cavidades están bordeadas en sus suturas loculares y espirales en la parte de arriba en lugar de estarlo solo por debajo y solo en el contorno exterior de la espiral ; de la segunda por el mismo caracter en lugar de no estarlo FORAMINIFERAS. 89. mas que en la sutura espiral y no en la de las celdillas: por lo demas son especies mui vecinas. Su espira está casi siempre á la izquierda. Aunque rara, la hemos encontrado en las arenas de la isla de Cuba y en las de la Martinica y la Jamaica. Por tanto, parece que habita en todas las Antillas. № 30. ROTALINA DEFORMIS. — (tOrb.) LAM. IV, FIG. 9-11. Roratina. Testa ovali, depressa, deformi, supra subtusque, convexa, punc- tata, flavescenti; spira minime convexa, anfractibus duobus; loculis sex obliquis, arcuatis, carinatis, subtus externeque solummodo limbatis, ultimo subcarinato; apertura elongata. Dimensiones. Ргйтето.............. 6 ритмов. лса. s... L millim. Concha ovalada, deprimida, frecuentemente diforme, punteada en la juventud, carenada igual- mente, convexa por arriba y por abajo; en la edad adulta algunas veces cóncava por debajo. Espira poco elevada, compuesta de dos ó tres vueltas, creciendo con mas rapidez que en la especie prece- dente; las suturas en cerquillo convexo. Celdillas seis á siete en la última vuelta, todas carena- das, angulosas en la juventud, casi redondeadas, prolongadas y mui arqueadas en la edad adulta; las suturas sencillas por arriba y por abajo; la última angular ó un poco redondeada por el lado de la boca; nada de disco umbilical. 4bertura en media luna sobre la vuelta de la espira. Color amarillento uniforme. Esta especie difiere de la precedente en que solo tiene borde por debajo, solo en la sutura es- piral y no entre las celdillas; por lo demas se le parece mucho, desfigurándose en cierta edad lo que no sucede en la otra. La hemos encontrado en la arena de Cuba, en la de la Martinica y en la de la isla de Santa Elena; pero siempre en pequeño número. No 31. ROTALINA ANTILLARUM. — (о.) LAM. V, FIG. 4-6. Һотлимл. Testa orbiculato-depressa, supra subtusque cequaliter convexa, punctata, margine carinata; spira conica minime convexa, anfractibus quatuor subplanis; loculis septem, supra obliquis, arcuatis, subcomplanatis, subtus trigonis; apertura elongata. Dimensiones. Diámetro............... З рамоз.............› +. a millim. Concha orbicular, deprimida, igualmente convexa por arriba y por abajo, fuertemente carenada 15 90 FORAMINIFERAS. en su contorno exterior, lijeramente punteada. Espira poco elevada, cónica, compuesta de cuatro vueltas creciendo poco rápidamente, sin suturas marcadas. Celdillas siete en la última vuelta, todas carenadas exteriormente, sencillas, sin ribetes; por encima son mui oblicuas, arqueadas, poco distintas; por debajo un poco convexas, formando un triángulo agudo cuyo lado mas peque- ño está sobre el contorno exterior ; la extremidad, con frecuencia un poco arqueada, se reune al centro umbilical sin disco ni depresion; la última no angulosa por el lado de la boca. Abertura en el medio de la anchura de la última celdilla formando una media luna en la vuelta de la espira y lijeramente cubierta por una salida. Color amarillento uniforme. Difiere de las dos precedentes por la falta de cerquillo y por su forma orbicular, se aproxima mas á la Котлима punctulata de Rimini por su forma discoidal y su falta de cerquillo, distinguién- dose ya por mas convexidad, una carena menos arqueada, menos celdillas y por el centro um- bilical convexo en lugar de estar mui poco deprimido. Está contorneada á la izquierda. La hemos encontrado raramente en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra, y en la de la Jamaica, recojida por M. de Candé. N° 32, ROTALINA CULTRATA. — ( d'Orb.) ТАМ. Y, FIG. 7-9. Roraima. Testa ovali, depressissima, punctata, carinata, culirala, supra subcomplanata, subtus convexiuscula; spira subplana, anfractibus duobus limbatis; loculis sex ovatis, contectis, supra limbatis. Dimensiones, Рібтеіғо............... PATRIO ao EIEE Бо. "в de millim. Concha ovalada, sumamente deprimida, mas convexa por abajo que por arriba, mui carenada y cortante en los bordes, lijeramente punteada. Espira casi plana, compuesta de dos vueltas cre- ciendo rápidamente, cuyas suturas están marcadas por un cerquillo bastante visible. Celdillas seis en la última vuelta, todas fuertemente carenadas, casi planas por arriba, un poco convexas por debajo, redondeadas en festones en su contorno, sencillas en sus suturas por la parte inferior, bordeadas por la parte superior, mui poco oblicuas ; la última redondeada: nada de disco umbili- cal, reuniéndose las celdillas sencillamente al centro. 4bertura poco larga sobre la vuelta de la espira. Color blanco uniforme. Es evidente que por su forma general y los ribetes de sus celdillas, esta especie tiene las mas íntimas relaciones con nuestras Rotana limbata del Adriático у R. nitida de la isla de Santa Elena; pero se distingue por una depresion mayor, lo que la hace mas cortante. El número de sus celdillas en la última vuelta tambien es diferente: se contornea indistintamente á dere- сһа б á izquierda. Esta linda conchita, una de las mas elegantes del género, se encuentra abundante en las arenas de Cuba, en las de la Martinica, la Guadalupe y la Jamaica, lo que nos induce А creer que se halla en todas las Antillas. FORAMINIFERAS. ; 91 № 33. ROTALINA SAGRA. — (d'Orb. LAM. Y, FIG. 13-18. Rotana. Testa elliptico-oblonga, depressa, punctata, alba, carinata, supra el subtus incequaliter convexa; spira subcomplanata, anfractibus duo- bus, simplicibus; loculis sex angulatis, carinatis, rapidissime crescentibus. Dimensiones. Diámetro + 1% puntos... 1/4 de millim. Concha oblonga б elíptica, deprimida, convexa por debajo, casi plana por encima, carenada, tambien cortante, punteada mui lijeramente. Espira apenas convexa, compuesta de vuelta y media á dos vueltas, cuyas suturas son sencillas, sin cerquillos ni depresiones. Celdillas seis en la últi- ma vuelta y creciendo tan rápidamente que la última es casi tan grande ella sola como lo restante de la concha, todas mui carenadas, arqueadas y triangulares por encima, menos arqueadas y de la misma forma por debajo, sin festones en sus bordes; su convexidad poco marcada, sin ribete ni disco inferior; la última celdilla convexa en la boca. Abertura estrecha sobre la vuelta de la espira. Color blanco uniforme. Esta linda especie tiene muchas relaciones con nuestra Rorarma elliptica, fosil de Dax, por el crecimiento rápido de su espira y de sus celdillas, diferenciándose al mismo tiempo por su contextura punteada en vez de ser rugosa y por mayor depresion : su parte superior es tambien mas plana. La hemos encontrado en la arena de Cuba y de la Jamaica, donde parece mui rara, á juzgar por las pocas que hemos hallado en gran cantidad de arena. № 34. ROTALINA DUBIA. — (d4'0rb.) LAM. п, FIG. 29-30; LAM. II, FIG. 1. Rorauina. Testa orbiculato- depressa, levigata, alba, umbilicata, subtus concava; spira convexiuscula; apice obtuso, anfractibus tribus convexis, cylindricis; loculis quatuor elongatis, minime distinctis. Dimensiones. Diámetro.. „105 puntos. 2... 05 de millim. Concha orbicular, deprimida, heliciforme, sin carena en los bordes, umbilicada, bastante cón- cava por debajo, mui lisa, brillante, transparente. Espira rebajada, con la extremidad obtusa, compuesta de tres vueltas subcilíndricas, convexas y separadas por suturas profundas. Celdillas cuatro en la última vuelta, todas prolongadas en el sentido espiral y poco separadas por las sutu- 92 FORAMINIFERAS ras; por debajo son triangulares y un poco oblicuas. 4bertura? No la hemos visto, у por eso co- locamos aquí esta especie con duda. Color blanco uniforme. Su profundo ombligo, el poco número de sus celdillas, por vueltas de espira y su aspecto heli- ciforme la distinguen de todo lo que conocemos en este género. La hemos encontrado en la arena de Cuba y de la Jamaica, donde parece mui rara. SUBGÉNERO. CALCARINA. — (00%) Concha libre, espiral, deprimida, mui rugosa. Espira enroscada de lado, del todo aparente por encima, envolviente por debajo. Celdillas prolongadas en apéndices marginales, algunas veces mui prolongados, representando en su totalidad como la ruedecilla de una espuela. 4bertura en hendi- dura longitudinal contra la рү vuelta de espira. ( Морёгкз, по 15, 1'е livraison; по 34, 2° livraison; n° 70, 3e livraison.) Relaciones y diferencias. Este subgénero semejante á las RoraLivas por su enroscamiento es- piral, por sus dos lados casi iguales en convexidad y por el sitio de su abertura, se distingue zoo- lógicamente por las mui largas prolongaciones exteriores de su contorno, apéndices singulares que hacen suponer en el animal un modo de secrecion del todo particular. Tenemos siete especies de este género todas de regiones calientes : de Madagascar, de la isla de Francia, de la Nueva Holanda, de la isla de Rawack, de la isla del Almirantazgo, del mar Rojo, de las islas Marianas y de las Antillas; distribucion que parece probar que estas singulares con- chas son mas particularmente del grande Oceano y las islas, donde entran por mitad en la compo- sicion de la arena de los mares. № 35. CALCARINA PULCHELLA. — (d'Orb.) LAM. V, FIG. 16-18. CaLcariNa. Testa depressa, orbiculari, rugosa, trispinosa, spinis elonga- tis, aculis; spira subplana, anfractibus distinctis; loculis convexis. Dimensiones, Diámetro 3 puntos. h millim. Concha deprimida, suborbicular, poco convexa por arriba y por abajo, mui rugosa, adornada en su contorno de tres largas espinas agudas independientes de las celdillas. Espira compuesta de tres vueltas mui poco distintas sin ser incrustadas. Celdillas nueve en la última vuelta, un poco convexas y arqueadas por encima, menos distintas y derechas por debajo, un poco convexas en festones en sus bordes, representando por debajo en su punto de union una especie de disco poco distinto; la última convexa. Abertura en hendidura poco ancha. Color amarillento. En este género no tenemos mas que dos especies que como ésta tengan puntos independientes FORAMINIFERAS. 93 de las celdillas, ó por lo menos en número diferente: una de ellas, la Carcarina Gaudichauda, siempre tiene cuatro б cinco y son obtusos ; la otra, la Cancarisa Spingleri, se halla en el mismo caso, y las dos por este caracter, lo mismo que por los tubérculos y la gruesa costra que las cubre, se distinguen mucho de la especie que nos ocupa. La hemos encontrado, aunque en corto número, en lá arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra. No 36. CALCARINA CALCAR. — (d'Orb.) ГАМ. У, FIG. 29,2%, CALCARINA calcar, d'Orb., 1825, Tabl. méth. des Céph., ne 1, Mopèies, n° 34, 2° livraison. CALCARINA. Testa depressa orbiculari, calcariformi, spinis numero loculos c«quantibus; spira convextuscula; anfractibus, tribus; loculis acuminatis. Dimensiones. Ю@тето................. РВЕ Оя 2 millim. Concha deprimida, suborbicular, un poco convexa por los lados, mui rugusa, sobre todo hácia el centro, donde las partes están poco distintas ; el contorno mui comprimido y adornado de tantas puntas como celdillas, éstas acuminadas y poco largas. Epira compuesta de tres vueltas, de las cuales las primeras están incrustadas y poco distintas. Celdillas neuve en la última vuelta, todas prolongadas en punta y con las suturas derechas. Abertura estrecha. Vecina de la Carcagma Defrancii d'Orb. por todas sus celdillas prolongadas exteriormente en puntas, esta especie se distingue en que estas puntas son digitales y agudas, en lugar de ser obtu- sas; están mucho menos prolongadas. Al colocarla como propia de las Antillas todavía mos queda alguna duda, porque si nuestras investigaciones hace catorce años, nos hicieron encontrar un individuo en la arena de dichas is- las, las que ahora acabamos de hacer no nos han presentado ninguno, lo que hace sospechar hu- biese algun error en la época de las primeras. GÉNERO 13. GLOBIGERINA. — (dOrb.) Concha libre, espiral, mui globulosa, siempre rugosa ó acribillada de agujeritos. Espira enros- cada de lado, compuesta de celdillas poco numerosas. Celdillas esferoides, representando en su to- talidad un conjunto espiral de globitos. 4bertura en forma de media luna ó de escotadura mas ó menos profunda, situada hácia el eje de la espira en el ángulo umbilical. (Морёівѕ, по 17, 1% li- vraison, y n° 76, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. El mismo enroscamiento espiral de casi todas las Trochoideas se ob- serva en este género, pero de un modo menos distinto á consecuencia del poco número y enorme 16 94 FORAMINIFERAS. grandor de las celdillas que le componen: se distingueaun en que todas sus celdillas en lugar de ser deprimidas б angulosas representan cada una su esferita. Su abertura en forma de media luna co- locada como en las Rosalinas y Valvulinas está sin diafragma. Algunas especies de este género nos han causado mucho embarazo : con las mismas celdillas esferoides, con las mismas formas, unas no tienen abertura alguna exterior mas que las tres chiquitas que cubren las últimas celdillas; otras en lugar de tener la abertura solo en la última сеа, tienen muchas en las últimas. No obstante, los enlaces que existen entre estas conchas, las relaciones exteriores, nos impiden for- mar otros tantos subgéneros distintos. Tenemos de este género diez y ocho especies vivas del Adriático, de las Canarias, de las Anti- llas, de la isla de Francia y de la de Santa Elena, mas numerosas en el Adriático y en las Antillas que en ninguna otra parte. Fosiles, son comunes en los terrenos terciarios de Italia y de Austria, mas raras en los dépositos de Burdeos, del Adour y de Paris; tambien se encuentran en la creta blanca de Paris, donde hemos hallado dos especies. En las Antillas tenemos tres especies, todas distintas y propias de estas islas. № 37. GLOBIGERINA RUBRA. — (dOrb.) LAM. IV, FiG. 12, 14. GLOBIGERINA. Testa elevata, rugosa, rubra; spira convexa, loculis tribus, sphæricis; aperturis plurimis. Dimensiones. Diámetro ................ S PANI II RAN 1/, millim. Concha elevada, rugosa ó como finamente erizada y taladrada. Espira saliente, compuesta de vuelta y media, ó en la edad adulta de cinco celdillas solamente. Celdillas esféricas, mui distintas, y tres en la última vuelta. Aberturas. Ademas de la abertura ordinaria colocada en el centro del ombligo, hai otras dos debajo de la última celdilla y una en la antepenúltima; sin embargo, este número parece que varía segun los individuos y no siempre es el mismo. Colores : las últimas cel- dillas son amarillas б amarillo-rojizas; se van presentando mas y mas teñidas de rojo á medida que se acercan á la extremidad de la espira, donde son de un rojo amarillento pálido. Por las tres celdillas que componen su ultima vuelta de espira, esta especie se acerca evidente- mente á nuestras GLopIcERIxA trilocularis, G. globularis y G. siphonifera; pero se distingue por su forma mas eleyada, por su color rojo, ademas por las numerosas aberturas de su penúltima y antepenúltima celdilla. La hemos encontrado bastante comunmente en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra; pero aun en mayor número en las de la Jamaica, Guadalupe y Martinica, reco- jidas por M. Fernando de Candé. Suponemos que habita en todas las Antillas. FORAMINIFERAS. 95 N° 38. GLOBIGERINA SIPHONIFERA. — (d'Orb. LAM. IV, FIG. 15, 17, 18. GLOBIGERINA. Testa creberrima, tubulifera, alba; spira plana, loculis tribus spheericis; apertura elongata. Dimensiones. Diámetro... . . 2 puntos. їз de millim. Concha globulosa, cubierta por todas partes de un gran número de tubitos abiertos por la extre- midad que la hacen parecer como erizada. Espira no saliente, compuesta solo de una vuelta, ó de cinco celdillas en la edad adulta. Celdillas esféricas б un poco ovales, mui distintas, siendo tres en la última vuelta. Color blanco uniforme. Como la Grosicrrina bulloides, que vive en el Adriático y enlas Canarias, esta especie tiene cua- tro celdillas solamente en la última vuelta de espira, caracter que encontramos sin excepcion en todos los individuos; pero se distingue fácilmente por las puntas tubulosas de que está cubierta : estas mismas puntas se encuentran es cierto en la бтоыбклїхл erizada; pero esta tiene otra forma diversa y la última vuelta se compone de cinco celdillas. Esta especie se encuentra en Cuba y la Jamaica; los egemplares de Cuba son mas pequeños y mucho mas erizados que los de la Jamaica, lo que puede consistir en degaste mas que en una va- riedad local, N° 39. GLOBIGERINA DUTERTREL — (d0Orb.) LAM. ТУ, FIG. 19, 21. GLOBIGERINA. Testa suborbiculata, convexa, alba, creberrime rugosa, spira convexo-oblusa, anfractibus tribus, distinctis; loculis quinis, oblongatis; su- turis excavatis; aperlura magna, in umbilico. Dimensiones. Юйтето................ оа уал оне 1, millim, Concha globulosa, discoide, elevada, rugosa por todas partes, debidas las rugosidades al contorno saliente de los muchos agujeros de que cada celdilla está acribillada. Espira convexa, con la extre- midad mui obtusa, compuesta de tres vueltas mui distintas y formada en el estado adulto de diez á doce celdillas. Celdillas ovales en el sentido del eje, siendo cinco en la última vuelta, mui separa- das y dejando en su centro un profundo ombligo. 4bertura en media luna, mui ancha, colocada en mas de la mitad de la última celdilla en el mismo ombligo. Color blanco ó blanco amarillento, Por su espiral bien distinta, compuesta de un gran número de celdillas, por las cinco celdillas de su última vuelta, esta especie tiene mucha analogía con nuestra G. fragilis fosil, de las cercanías de Dax, pero traspasada por agujeros mayores; se distingue por su contextura mas porosa, mas rugosa, y por su abertura mas ensanchada. La hemos encontrado en las arenas de la isla de Cuba y en las de la Martinica y la Guadalupe. 96 FORAMINIFERAS. GÉNERO 14. PLANORBULINA. — (d'0rb.) Concha fija. espiral, discoidea, mui deprimida y sumamente perforada. Espira irregular, discoi- dea, compuesta de un gran número de vueltas, enroscada en el mismo plano, aparente por los dos lados, pero mas cubierta por encima que por debajo. Celdillas convexas por encima, truncadas por debajo, y modeladas sobre los cuerpos que las reciben. 4bertura semilunar contra la vuelta de la espira. (MopéLes, по» 78 y 79, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. Fijas como las Truncatulinas y desiguales como ellas, las Planorbuli- nas se distinguen en que su espira, siempre aparente por los dos lados, se compone de un gran número de vueltas, y que su abertura en lugar de prolongarse de una celdilla á otra permanece sobre la última y no siempre es visible. Por lo demas es una concha acribillada de agujeros en sus últimas celdillas como las Truncatulinas, Conocemos cuatro especies de este género, todas vivas, una del mar del Sur, una del Mediter- neo, una de las costas francesas del Oceano y la cuarta mui comun en el Mediterraneo, pero que se encuentra tambien en las Canarias y las Antillas. № 40. PLANORBULINA VULGARIS. — (d4070.) ЖАМ: VI, FIG. 11 а 15. Soldani, Test., tom. Tl, tab. 162, fig. н, р. 238, y tab. 161, fig. E, r,G. — Planorbulina mediterranensis:, d'Orb., 1825, Tableau méthodique des Cé- phalopodes, р. 114, n° 2. PLANORBULINA. Testa orbiculari, depressissima, punctata, alba vel flaves- cente; anfractibus numerosis, irregulariter involutis; loculis inceequalibus nu- merosis; subtus truncatis , sguammosis , supra convexis. Dimensiones. Юййлето.................... А 2... 3 millim. Concha mui deprimida, generalmente suborbicular, otras veces diversamente contorneada , si- guiendo la forma del cuerpo sobre que se fija, señalada en todas partes por agujeritos visibles, so- bre todo en las últimas celdillas; mui plana por debajo, cóncava por encima, su contorno festo- neado irregularmente. Espira compuesta en la edad adulta de seis á ocho vueltas, de las cuales solo las primeras son distintas, las otras suelen ser difíciles de seguir en la colocacion de las celdillas. Celdillas globulosas, redondeadas, poco regulares en anchura, truncadas por debajo y como en es- cama, abombadas por arriba y separadas por grandes suturas; por encima solo se cubren como hasta la mitad y por eso son bastantemente aparentes. 4bertura suele ser poco visible, sobre todo en los egemplares de las Antillas. Color blanco, rosado, amarillento, siempre mas teñido en el centro que en parte ninguna. ! Hemos cambiado este nombre por encontrarse la especie en otras partes mas que en el Mediterraneo. FORAMINIFERAS. 97 Vecina por su enroscamiento de la PLaxorbuLINA nitida de las costas de Francia en el Oceano, esta especie se distingue por sus celdillas mucho mas estrechas, mas aparentes por encima, me- nos envolvientes, por su enroscamiento mas irregular y otros muchos caracteres que la compa- racion hace resaltar 4 primera vista. Mui repartida en los mares, esta concha habita en el Mediterraneo, donde es comun, la isla de Tenerife y todas las Antillas. En Cuba se encuentra abundantemente, lo mismo que en el golfo de Méjico y mar de las Antillas, La hemos encontrado en gran número fija en diferentes cuerpos, pero sobre todo en las conchas de Pinna. GENERO 15. TRUNCATULINA. — (dOrb.) NavriLus, Linn., Gmel., Porxxenis, Cisicipes, Montf, Concha fija, espiral. Espira discoidal, enroscada en el mismo plano, aparente del lado fijo, en- volviente y convexa por el otro. Celdillas convexas por encima y planas por debajo. ремита en hendidura que apareciendo un poco por arriba se continua por bajo en la línea sutural hasta la segunda antepenúltima celdilla, (Monètes, по 37, 2° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género representa del todo por su espira sumamente truncada y plana un pequeño Nautilo dividido en dos. Con las Planorbulinas tiene mas relaciones, las únicas conchas que están fijas por el lado espiral, pues las Rosalinas lo son por el lado opuesto. Se distingue de la Rotalina por su abertura prolongada en el lado espiral en vez de estarlo solo en el costado de la última celdilla, y de las Planorbulinas por la espira no aparente por arriba y por la abertura. Conocemos mas de diez especies de este género, mui abundante en las costas del Adriático y del Mediterraneo, en las del Oceano atlántico en Europa, en las de Tenerife, del Cabo de Buena Esperanza, en Madagascar, Rawack, Terra-Nova, en Irlanda, y no tan comun en las Antillas. Se encuentran muchas fosiles en los terrenos terciarios de Italia y Austria, en los de Burdeos y de Paris, en el crag de Inglaterra; así este género parece estar igualmente repartido en una inmensa superficie de mares, y lo hemos encontrado en el litoral de la América meri- dional, en el Oceano atlántico уеп el grande Oceano. Muchas de las especies fosiles tienen sus análogas vivas. Las Antillas nos han ofrecido dos especies. № 41. TRUNCATULINA ADVENA. — (40rb.) LAM. VI, FIG. 3, 4 y 5. TRUNCATULINA. Testa depressa, orbiculari, subcarinata, punctata, alba; anfractibus tribus; loculis octo convexis, suturis excavatis. Dimensiones. Diámetro .. '/a millim. Concha deprimida, suborbicular, marcada de puntos ó agujeritos mui pequeños, bastante con- vexa por encima, no umbilicada, pero un poco deprimida en el centro, mui plana por debajo. 17 98 FORAMINIFERAS. Espira compuesta de dos vueltas y media. Celdillas, ocho en la última vuelta, todas arqueadas, convexas, separadas рог una sutura bastante profunda y formando como un feston regular en sus bordes; la última un poco convexa. 4bertura ocupando solo la última celdilla. Color blanco uni- forme. No hai duda en que esta especie es vecina al mismo tiempo de la TruxcaruLiva miquelonensis y de la TruxcaruLixa tuberculata ; pero al compararlas hemos encontrado que está mas recortada en los bordes que la primera, que tiene estos bordes menos carenados que ninguna de las otras dos, y que por su centro lijeramente escavado se distingue aun fácilmente. Esta especie se en- Cuentra en Cuba y la Jamaica, y en todas partes es гага. N° 42. TRUNCATULINA CANDEI. — (d4'0rb.) LAM. Ш, FIG. 6, 8. TRUNCATULINA. Testa depressissima, orbiculari, alba, irregulari, carinata: carina acuta; umbilico convexo distincto, anfractibus duobus, loculis de- pressis , arcuatis, supra convexiusculis, lævigatis; subtus marginatis. Dimensiones. Юдтето................ IO IA la millim. Concha sumamente deprimida, suborbicular, un poco irregular, lijeramente convexa hácia ar- riba por el centro, donde se nota un disco umbilical pequeño y poco saliente, mui adelgazada hácia los bordes en extremo cortantes. Espira compuesta de dos vueltas. Celdillas seis en la última vuelta, todas mui arqueadas, irregulares, anchas, bastante convexas, bien separadas por suturas profundas y representando en sus bordes un feston irregular, cuya convexidad está deprimida; cada cual está mas arqueada por abajo que por arriba, está lisa en la sutura, pero orillada de un limbo en todo su contorno exterior ; solamente la última es cortante en los bordes. 4bertura poco marcada. Color blanco uniforme. Esta especie se distingue claramente de otras Truncatulinas por su disco umbilical, que solo encontramos en ella, lo mismo que por el ribete solo inferior y exterior; la única especie ori- llada es nuestra TruxcaruLiva ariminensis, que lo está par encima como por debajo y ademas carece de disco. Esta linda especie parece mui rara; la hemos encontrado en la arena de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra, y la hemos dedicado á M. Fernando de Candé. GÉNERO 16. ANOMALINA. — (40rb.) Concha libre, deprimida, rugosa ó perforada. Espira no aparente y envolviente del todo por el lado opuesto а la abertura. Celdillas abombadas y prolongadas. 4bertura en hendidura situada en la region umbilical, algunas veces continuándose de una celdilla á otra. (Mopères, по 42, 11° livraison.) FORAMINIFERAS. 99 Relaciones y diferencias. Este género no se distingue de las Rosalinas, cuya abertura tiene, mas que por su espira que en lugar de ser trochoide, elevada, siempre aparente por encima, es por el contrario envolviente como la del Nauritus ; por lo demas la misma contextura de concha. No hubiéramos considerado esta division mas que como un subgénero de las Rosalinas, si no hubiésemos encontrado este caracter constante en un buen número de especies y si, por otra parte, las Rosalinas no fuesen ya bastante numerosas. Hemos examinado cinco especies de este género, de las cuales tres vivas, dos del Adriático y una de la isla de Francia. De las dos fosiles una es de los terrenos terciarios de las orillas del estanque de Thau, las otra de las cercanías de Burdeos, donde es tan comun que puede ser mi- rada como característica de aquel depósito. GÉNERO 17. ROSALINA. — (d'Orb.) RosaLixa, TuRBINOLINA, d'Orb., Tabl. Concha libre ó lijeramente fija por la parte del ombligo, deprimida ó trochoide, rugosa ó su- mamente perforada en sus últimas celdillas. Espira aparente por encima, rebajada ó cónica. Cel- dillas deprimidas y algunas veces carenadas. 4bertura en hendidura situada en la region umbilical y continuándose de una celdilla á otra, (MonéLes, по 38, 49, 2 livraison; поз 69, 74, 75, 3e li- vraison.) Relaciones y diferencias. Este género compuesto de conchas de las mas perforadas y por lo regular adherentes al Fucus y otros cuerpos submarinos, por su lado umbilical en vez de serlo por el lado espiral como las Truncatulinas, no está fijo, sin embargo, mas que mui lijeramente y sin duda por el animal solo, puesto que se aumenta por la parte misma por donde adhiere, como lo vemos en las Crepidulas entre los Gasteropodes. Las Rosalinas parecen no cambiar de sitio, lo que anuncia la forma arqueada de algunos individuos fijos en un cuerpo cilíndrico. Todas las demas conchas se encuentran libres, pero algunas especies de éstas se hallan aun pegadas en gran número al lugar en que han vivido. Por lo demas su forma es apropiada á este género de existencia, porque son frecuentemente planas б cóncavas por debajo y abiertas anchamente en el centro, sin duda para dejar salir el órgano que le fija á los cuerpos. Exteriormente las conchas se distinguen de las Котлимл por su abertura central ocupando lo inferior de casi todas las últimas celdillas, en lugar de estar solamente en el costado de la última: se distinguen de las Valvulinas en que porlo regular están fijas y no tienen opérculo valvular en el centro, cubriendo la abertura única y no continua: sin embargo, es evidente que este género se aproxima mas á las Palvulinas que á las otras, egecutando el paso de las Rotalinas à las Valvulinas. Hemos reunido en este género todo el subgénero Turbinolina de nuestro cuadro, porque he- mos reconocido el mismo caracter de abertura. Sucede lo mismo á nuestro género Planulina que no difiere mas que por un ombligo mas abierto permitiendo ver las vueltas de espira, lo que nos habia hecho colocarle entre los 4mmonoides reunidos á los Nautiloides por los géneros de conchas equiláteras. Conocemos cuarenta y siete especies de este género, y de ellas treinta y tres vivas, entre las cuales doce de las Antillas, una de Tenerife, dos de las costas del Perú, dos de la Patagonia, tres del Mediterraneo, cuatro de las costas de Francia en el Oceano atlántico, siete del Adriático, una de Rawack, una de las islas Marianas, una de Santa Elena. Fosiles mo conocemos mas que catorce; 100 FORAMINIFERAS. hemos encontrado once en los terrenos terciarios, dos en los de Burdeos, tres en los de Paris, cuatro en los de Italia y dos en el crag de Inglaterra : tenemos una especie de los terrenos creta- ceos de Maestricht, y poseemos dos de la creta blanca de Paris. № 43. ROSALINA SQUAMMOSA. — (d'Orb) LAM. їп, FIG. 12, 14. Rotana squammosa, d'Orb., 1825, Tableau des Céphal., р. 106, n° 8. Rosara. Testa orbiculato-convexa, trochiformi , subcarinala, supra ele- vata , conica, longitudinaliter creberrima, subtus subconcava, lævigata; spira elevata, сопіса, apice obtusa; anfractibus quinque, suturis complanatis. Lo- culis sguammosis, obliquis, carinatis , subtus suturis irregularibus excavatis. Dimensiones, Юйтето............... pantok, AN ATR °з de millim. Concha orbicular, trochiforme, mui elevada, casi tan alta como ancha, carinada, convexa y có- nica por encima, cubierta por todas partes de agujeritos en líneas longitudinales ; cóncava por debajo, marcada en esta parte de agujeritos solo en el borde de las celdillas, lo demas liso. Espira elevada, cónica, ahuecada en su longitud, la extremidad obtusa y compuesta de cinco á seis vuel- tas poco distintas, sin salida entre sí, Celdillas escamosas en su totalidad, todas oblicuas carenadas, sin salidas entre sí por arriba, como festoneadas en el borde de la carena por su lijera convexidad inferior : su número es siete y están convexas por debajo de la última vuelta de espira ; sus su- turas están marcadas por arriba en la transpariencia ; por debajo las suturas son profundas y forma cada una su doble cavidad irregular entre cada celdilla. Abertura ocupando toda la parte umbilical de la última celdilla y continuándose bajo las otras de modo que deja un disco umbilical cóncavo ó de relieve en el medio. Color. En algunos individuos la extremidad de la espira es roja violada, en otras es azulada y la tinta disminuye de intensidad á medida que se acerca á la base : la parte inferior es blanca. Por su forma trochoide carinada se distingue esta especie de todas las demas з su parte inferior tiene alguna relacion con la Rosara Poeyi, pero difiere por su tinta, por su espira ahuecada y cónica, lo mismo que por la colocacion de sus celdillas en el centro inferior. Se presenta del mismo modo contorneada á la derecha que á la izquierda. Hemos encontrado esta especie aun adherida copiosamente á los Fucus y á la Uva lactuca traidos de Cuba por D. Ramon de la Sagra. Habita tambien en la Jamaica y casi en todas las Antillas. N° 44. ROSALINA POEYI. — (40rb.) LAM. їп, FIG. 18, 20. RosaLina. Testa orbiculato-depressa, trochiformi, subcarinata, supra ir- FORAMINIFERAS. 101 regulariter perforata, subtus leevigata, spira convexiuscula, obtusa, anfrac- tibus quatuor; loculis minimis, squammosis. Dimensiones. Diámelro.............. 3 panlos. cosmos». з millim. Concha orbicular, deprimida, trochiforme, carinada, parte de arriba cónica, irregularmente perforada de agujeritos; parte de abajo cóncava, lisa еп el medio, punteada solo en el borde. Espira cónica poco elevada, con la extremidad bastante aguda, compuesta de cuatro vueltas no separadas por suturas. Celdillas siete por vuelta, oblicuas, carinadas, sin salidas ni suturas mar- cadas por encima, lijeramente convexas por debajo y separadas por suturas profundas, ensanchán- dose en celdilla irregular hácia la mitad de cada celdilla y formando una especie de seno que comunica con la depresion que rodea un disco umbilical convexo. 4bertura separada del disco, ocupando la extremidad de cada celdilla hácia el centro. Color blanco uniforme. Como ya hemos dicho en la especie precedente, ésta se aproxima mucho, al paso que se distin- gue por su espira una mitad menos alta, no ahuecada por los lados y menos obtusa en su extre- midad, por su tinta uniforme, lo mismo que por la forma de los senos que rodean el disco umbilical. Se enrosca lo mismo á derecha que á izquierda. Hemos encontrado esta especie en las mismas circunstancias y en los mismos parajes que la Ћоѕлима squammosa ; se encuentra tambien en las arenas de la Martinica. La dedicamos 4 М. Poey, naturalista distinguido de la isla de Cuba. № 45. ROSALINA OPERCULARIS. — (d'Orb.) LAM. Ш, FIG. 24, 25 ; LAM. IV, FIG. 1. Rosara opercularis, d'Orb., 1825, Tab. des Céph., p. 105, n° Т. Rosauixa. Testa ovato-depressa, carinata; spira brevi, conica; anfractibus tribus complanatis. Loculis numerosis, angustatis arcuatis , supra lævigata, subtus transversim striata; umbilico disculo ornato. Dimensiones. Рёйте{то............... рио nie) 2/4 de millim. Concha oval, mui deprimida, trochoide, sumamente carinada, la carina cortante y entera, un poco cónica y lisa por encima, lijeramente cóncava por debajo. Espira cónica, mui poco elevada, con la extremidad un poco aguda, compuesta de tres vueltas unidas sin salidas entre sí. Celdillas cerca de diez en la última vuelta, todas mui estrechas, mui arqueadas, lisas y sin suturas profun- das por encima, estriadas al traves y saliendo en gradillas por debajo, dejando en su centro un pequeñito disco umbilical un poco convexo. Abertura en hendidura al rededor del disco. Color blanco uniforme. Esta linda especie, una de las mas pequeñitas del género, se distingue por sus celdillas apro- ximadas, por su disco y por las estrías de su parte inferior, caracteres que no encontramos reunidos en ninguna otra. No la hemos visto mas que siniestra La hemos hallado rara vez en las arenas de la isla de Cuba y en las de la Martinica. 102 FORAMINIFERAS. № 46. ROSALINA AUBERIL — (40rb.) ' LAM. IV, FIG. 5, 8. Ж Testa orbiculato-conica, carinata, supra sublusque perforáta, luteo-rubescente; spira conica, anfractibus tribus subplanis; loculis magnis iS, per q que spiram quaternis. Y Dimensiones. Diámetro. О PAVOS, e NO 3 de millim. Concha orbicular, trochiforme, carinada, cónica por encima, casi plana por debajo; perforada por todas partes de agujeros bastante grandes, igualmente espaciados y orillados de un cerquillo mui lijero. Espira cónica, elevada, con la extremidad poco aguda, compuesta de tres vueltas poco salientes unas sobre otras, las suturas apenas marcadas. Celdillas cuatro por vuelta, todas anchas por encima, en semicírculo, mui oblicuas, poco convexas, bastante escotadas y separadas en su punto de union en el ombligo, donde cada una forma una punta libre. 4bertura ocupando la extre- midad de las celdillas todo al rededor del ombligo. Color su tinta general ез amarillenta, pero en la parte superior el amarillo pasa á rojo, que se hace mas intenso conforme se aproxima á la vuelta de la espira. Ninguna otra especie puede ser comparada á ésta por su forma trochoide y sus pocas celdillas por vuelta de espira. Es tambien una de aquellas en que los agujeritos de la concha están mas distintos. Hemos notado que se enrosca del mismo modo á la derecha que á la izquierda. La hemos encontrado, aunque rara, en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en la de la Martinica, recojida por M. Fernando de Candé. La dedicamos á M. Auber, de Cuba, al que debemos muchos Moluscos de esta isla. Ne 47. ROSALINA SEMISTRIATA. — (d'Orb. LAM. Ш, FIG. 15, 17. RosaLina semi-striata, d'Orb., 1825, Tableau méth. des Céphal., p. 105, n° 3. Rosatixa. Testa depressa, perforata, supra subplana, subtus concava , тат- gine transversim striata; spira subplana, anfractibus tribus; loculis convexis, distinctis, per quamque spiram quaternis. Dimensiones. Р@те®о............. Ао з de millim. Concha oval, mui depremida, no carenada, mui poco convexa por encima, un poco cóncava por debajo, perforada en todas partes, pero teniendo en los bordes por debajo los poros colocados en líneas transversales que parecen estrías interrumpidas. Espira casi plana ó apenas convexa, com- puesta de tres vueltas bastante separadas por las suturas. Celdillas cuatro por vuelta, todas mui FORAMINIFERAS. 103 convexas, oblicuas por encima, casi angulosas por debajo, donde cada una forma una ancha punta opercular distinta, separada del resto de la celdilla por una depresion marcada cubriendo la última en el centro una parte de las demas. 4bertura ocupando todo lo inferior de la parte opercular de cada celdilla en la region umbilical. Color blanco uniforme. Por su contorno redondeado, por su forma mui deprimida, esta especie tiene relacion con la siguiente, de la que difiere, sin embargo, por la falta de orilla en las celdillas, lo mismo que por las semi-estrías de los bordes. Este caracter la distingue tambien de todas las que conocemos. Se enrosca á derecha б а izquierda. Hemos descubierto esta concha en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y la hemos vuelto á encontrar en las de la Jamaica y Martinica, aunque rara. N° 48. ROSAT А VALVULATA. — (d'Orb. ГАМ. їп, FIG. 21, 32. Rosarmwa valvulata, d'Orb., 1825, Tabi. méth. des Céphal., р. 105, n° 4. Rosara. Testa depressa, lutescente, supra convexiuscula, subtus concava, margine convexa, limbata; spira minime convexa, anfractibus tribus dis- tinctis. Loculis subplanis, limbatis. Dimensiones. Diámetro... ......... о ДЕ «a millim. Concha oval, deprimida, no carinada, poco convexa por encima y bastante por debajo; sin poros aparentes. Espira mui poco convexa, compuesta de tres vueltas bien distintas sin ser mui convexas. Celdillas cinco por vuelta, un poco convexas, oblicuas, arqueadas, orilladas de un cer- quillo por encima, regularmente triangulares, están bordeadas solo por afuera; en el centro cada una forma una especie de lengueta ancha, angulosa, sinuosa en los bordes, y Cubriéndose unas á otras. Abertura ocupando la mayor parte de cada lengueta umbilical. Color amarillo uniforme, mas bajo en los ribetes superiores de las celdillas. Esta especie tiene muchas relaciones generales de forma con la precedente, pero difiere por los ribetes de sus celdillas, por la falta de agujeros aparentes y de estrías marginales; así se distin- guen perfectamente una de otra á primera vista. Es indiferentemente diestra ó siniestra. La hemos encontrado en las arenas de la isla de Cuba, en las de la Jamaica y la Martinica, lo que nos hace suponer que habita en todas las Antillas. № 49. ROSALINA CANDEIANA. — (40rb.) LAM. IV, FIG. 2, 4. RosALina. Testa orbiculato-depressa, tuberosa, perforata, rugosa, supra minime convexa, sublus umbilicata; spira convexiuscula, anfractibus tri- 104 FORAMINIFERAS. bus convexis; loculis tuberosís, per quamque ѕрігат senis, in umbilico acu- minatis. ‚.. Ya millim. Dimensiones. Diámetro... +. 3 puntos, Concha casi orbicular, deprimida, no carinada, bastante convexa por arriba y por abajo, um- bilicada, anchamente perforada por todas partes y un poco rugosa. Espira un poco convexa, mui obtusa, compuesta de tres vueltas convexas mui separadas por suturas profundas. Celdillas seis por vuelta, mui convexas, tuberculadas, mui poco oblicuas por encima, lijeramente arqueadas por debajo, formando en el ombigo una punta libre, separadas unas de otras por un seno profundo, pero sin representar válvulas ni opérculo. Abertura ocupando lo superior de la extremidad libre de todas las celdillas en el ombligo. Color blanco pasando al amarillento bajo y á veces tambien al rojizo en la extremidad de la espira. Mui vecina de las dos precedentes, esta Rosalina difiere esencialmente por su forma mas abom- bada, sus celdillas mas convexas, su falta de opérculo distinto en el centro inferior, por la extre- midad libre de sus celdillas, caracteres diferenciales que muestra inmediatamente la comparacion de las figuras. Es mui variable, á veces mucho mas abombada ó mas deprimida, se contornea tambien indife- rentemente á derecha ó á izquierda. No la hemos encontrado mas que en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra. N° 50. ROSALINA BULLOIDES. — (4'Orb.) TAM UN PIG оду 8), Rosara. Testa globuloso-orbiculata, perforata , rubescente , supra subtusque convexa; spira convexo-obtusa, anfractibus quatuor distinctis; loculis squam- mosis, ultimo magno, bullato. Dimensiones. Diámetro. . ‚ */3 de millim. Алаг 2 puntos... Concha globulosa, suborbicular, mui inflada, no carinada, mui convexa por arriba y abajo, sin estar umbilicada, perforada de agujeros mui marcados, sobre todo los de la última celdilla inferior, al rededor de cada uno de los cuales se nota un pequeño cerquillo. Espira mui obtusa en su extre- midad, redonda en su totalidad, compuesta de cuatro vueltas bien distintas. Celdillas cinco por vuelta, convexas por arriba, en semicírculo, mui oblicuas y como en escamas por abajo, la última cubriendo en parte á todas las demas y mostrándose como una ancha ampoya transparente que oculta las cinco sextas de aquella parte. 4bertura: no hemos podido distinguirla, tal vez no exista ó esté oculta por abajo. Color rojizo mui pálido, mas subido en el final de la espira; la última celdilla casi blanca. Por su última celdilla, tan grande y tan convexa, por su forma casi esférica, esta especie se distingue de todas las demas y forma como una anomalía; sin embargo, todos sus caracteres la colocan evidentemente en este género. Lo mismo que la mayor parte de las especies se enrosca _ indistintamente á derecha ó á izquierda. Rara en Cuba, y mas comun en Haiti, la hemos encontrado en la arena traida de esta Antilla por M. F. de Candé. FORAMINIFERAS. 108 N° 51. ROSALINA CATESBYANA. — (d'Orb. LAM. IV, FIG. 22, 24. Rosara. Testa orbiculato-depressa, umbilicata, rugosa, albo-flavescente ; spira depresso-conica, anfractibus quatuor convexis ; loculis decem angulatis, obliquis, minime convexis, ultimo subcarinato. Dimensiones. Юйтето........ ..... О УДАА рр ос А '/a de millim. Concha suborbicular, bastante convexa por los dos lados, con el contorno redondeado, mas convexo por encima que por debajo, donde es umbilicado y sin disco, lijeramente rugoso. Espira rebajada, obtusa, compuesta de cuatro vueltas convexas separadas por suturas, creciendo poco rápidamente de las primeras á las últimas. Celdillas diez enla última vuelta, por arriba cuadran- gulares, oblicuas, poco convexas, separadas por una sutura bien marcada ; por abajo casi derechas, poco convexas, formando hácia el centro un ángulo agudo cuya extremidad está libre en el om- bligo. 4bertura ocupando toda la extremidad por debajo de las últimas celdillas. Color blanco б algo amarillo. Esta especie que se acerca å la Rosara Becarii y á otras muchas mui análogas por su enrosca- miento espiral, se diferencia por la falta de disco umbilical. Bajo este último aspecto es vecina de nuestra R. corallinarum, siempre distinguiéndose por la falta de estrías inferiores. La hemos encontrado, aunque raramente, en la arena de la isla de Cuba y en la de la Martinica. No 52, ROSALINA PARKINSONIANA. — (d'Orb,) LAM. IV, FIG, 25, 27. Nautilus Becarii, Parkinson, t. XII, fig. 25 á 28. — Nautilus Becarii, Brookes, Syst. conch., t. V, fig. 58 (mala). — Rotalia Becarii, d'Orbigny, 1825, Tabl. des Céph., p. 109, n° 42. Rosauina. Testa orbiculato-depressa, lævigata, nitida, alba ; spira con- vexiuscula , obtusa; anfractibus quatuor distinctis; loculis novem, convexis; disco in umbilico. Dimensiones. Юйтето............... 2 ратбоѕ,. о... 1А дг millim, Concha suborbicular, mui deprimida, de contorno redondeado, poco convexa por debajo, pro- vista de un ancho disco umbilical, brillante, casi lisa, transparente. Espira mui deprimida, obtusa, compuesta de cuatro vueltas convexas y mui distintas. Celdillas nueve en la última vuelta, lisas por encima, oblicuas, mui arqueadas, abombadas, mui recortadas en el contorno, separadas por suturas profundas ; arqueadas igual por abajo, abombadas, estrechas, lisas en la mitad de su 19 106 FORAMINIFERAS. longitud ; lo restante del lado del disco rugoso y lijeramente estriado en aspas en el borde de las suturas; punta umbilical libre. 4bertura ocupando la extremidad de las celdillas al rededor del disco. Color blanco. Esta especie, vecina de la RosaLiwa Весат por su depresion y por su disco central, se distingue por un tamaño mitad menor, lo mismo que por su parte inferior lisa en la mitad de su longitud, mientras que en la otra está sumamente estriada por todas partes. Cuando en muestro cuadro de los Cephalopodes hemos, segun Turton y Parkinson, referido esta especie al Nauritus Becarii, nos hemos ñad pl Hemos ido despues que el verdadero Naurmus Becarii'no es la especie del Oceano que hoi dedicamos á Parkinson, sino la especie comun del Adriático figurada por Plancus, á la que por error hemos llamado RoraLixa tortuosa (MoniL»s, по 40.) Reproducimos con duda esta especie entre las cubanas. En 1823 hemos encontrado un egem- plar en las arenas de las Antillas; pero tememos que estuviese por casualidad, porque evidente- mente tiene por patria todas las costas europeas del Oceano atlántico, en Francia, en Inglaterra, en Holanda y en el Norte. № 53. ROSALINA LINNEIANA. — (d'Orb.) LAM. V, FIG. 10, 12, Коѕлимл. Testa orbiculato-depressa, rugosa, alba, margine bicarinata , umbilicata: umbilico magno; spira subplana , anfractibus tribus distinctis; loculis sex lateraliter compressis, supra subtusque limbatis. Dimensiones. Diámetro...........o.o. puntos E 14 de millim. Concha suborbicular, mui deprimida, bicarenada en su contorno, un poco cóncava por debajo, sumamente umbilicada, pero sin disco umbilical ; la superficie es mui rugosa. Espira apenas sa- liente, bien marcada por los ribetes de las celdillas, compuesta de tres vueltas, la primera de las cuales está disimulada en parte por las rugosidades. Celdillas comprimidas en número de seis por vuelta, oblongas, aplastadas por debajo; oblicuas, orilladas de un cerquillo; por debajo están mas particularmente orilladas por el lado exterior y umbilical, pero los cerquillos están menos señala- dos que por encima. 4bertura en el borde de las celdillas en el ombligo. Color blanquizco uni- forme. Por su dorso bicarenado, por el aplastamiento de sus celdillas arriba y abajo, por sus grandes cerquillos, lo mismo que por su ancho ombligo, esta especie se distingue de las otras de un modo tan marcado que no puede ser confundida con otra alguna. La hemos encontrado en la arena de la isla de Cuba, traida por D. Ramon de la Sagra. Es excesivamente rara. N° 54. ROSALINA EDWARDSIANA, — (40rb.) LAM. VI, FIG. 8, 10, Rosatina. Testa ovali, depressa, rugosa; supra subcomplanata; subtus FORAMINIFERAS. 107 convexa; margine subcarinata; umbilico magno; spira complanata, anfrac- tibus tribus depressis; loculis octonis, supra complanatis, limbatis, subtus convexis, simplicibus. Dimensiones. Diámetro ‚ 2 puntos... а de millim. Concha oblonga, gruesa, rugosa, punteada, mui deprimida, un poco carenada en el contorno, cóncava б aplastada por encima, convexa por debajo, umbilicada, el ombligo abierto lo suficiente para dejar ver las tres cuartas partes de la anchura de las vueltas de la espira. Espira deprimida, distinta, compuesta de tres vueltas un poco cubiertas por el retorno. Celdillas ocho, deprimidas, prolong estrechas, aplastadas y orilladas de un cerquillo saliente por arriba, con- vexas y no orilladas por debajo. 4bertura por lo bajo de las otras dos últimas celdillas en el om- bligo. Color amarillento uniforme. Bastante vecina de nuestra RosaLixa ariminensis (PLanuLINA ariminensis) рог la forma, por las vueltas de espira aparentes por los dos lados, se distingue, no obstante, por menos aplastamiento y por sus celdillas orilladas solo por un lado en lugar de estarlo por los dos. Esta concha, bas- tante rara, se encuentra en Cuba y la Jamaica. GÉNERO 18. VALVULINA. — (dOrb.) Concha libre, espiral, cónica, turriculada ó deprimida, rugosa. Espira prolongada, trochoide ó deprimida. Celdillas poco numerosas, colocadas en un eje espiral regular, bastante salientes. Abertura en media luna transversal al eje, situada cerca del ángulo umbilical y cubierta en parte por una especie de lámina convexa, saliente, ú opérculo valvular que cubre toda la parte umbili- cal. (Movies, по 25, 1° livraison.) Relaciones y diferencias. Por la forma prolongada de muchas especies hai relacion evidente entre este género y las Buliminas, pero se distingue claramente por uná depresion umbilical que nunca existe en las Buliminas, y ademas por su abertura transversal en lugar de ser longitudinal al eje, y siempre cubierta de una válvula opercular en lugar de ser simple. La forma deprimida de ciertas especies las aproxima á las Rosalinas, lo mismo que su abertura umbilical, bien que se distinguen en que ésta continúa de una celdilla á otra en la parte umbilical en las Rosalinas pro- vista de un opérculo; no existe mas que en la última en las Valvulinas. Si hai una línea de demar- cacion bien trazada entre este género y las Buliminas, no siempre la hai con las Rosalinas, donde en ciertas especies se nota el paso de un género á otro. Tenemos hasta la presente quince especies de este género, la mayor parte de ellas fosiles. En especies vivas poseemos seis: dos de las Canarias, dos de la costa occidental de la América meridio- nal, una delas Antillas y una de Rawack; así estarian repartidas igualmente en todos los mares á pesar de no existir en el Mediterraneo. En especies fosiles tenemos nueve, de las cuales siete de los terrenos terciarios de Paris y de Valogne y una de los terrenos cretaceos (creta blanca) del de- pósilo de Paris. 108 FORAMINIFERAS Ne 55. VALVULINA OVIEDOIANA. — (4070.) LAM. п, FIG. 21 y 22. VALVOLNA. Testa oblongo-conica, rugosa, flavescente, anguloso-trincarinata ; spira сопіса, irregular, apice obtuso, anfractibus quinis angulosis; loculis tribus supra angulatis, subtus convexis; valvula magna. Dimensiones. Longitud (ойа1.............. Арта 2 de millim. Concha oblonga, cónica, mas larga que ancha, mui rugosa y poco regular, triangular en su to- talidad. Espira elevada, cónica, irregular, con la extremidad obtusa, compuesta de cinco vueltas angulosas con suturas marcadas y profundas. Celdillas tres en cada vuelta, carenadas ó angulosas por arriba, convexas por debajo; la última mui abombada, un poco deprimida en el centro umbi- lical ; todas mui distintas unas de otras. Válvula ancha, oval, colocada en la parte umbilical en la depresion de la última celdilla. Color amarillento pasando algunas veces al blanco. Vecina por su forma triangular de la VaLvuLisa triangularis, fosil en las cercanías de Paris, esta especie difiere por los ángulos que forma la salida de las celdillas en el enroscamiento espiral y por la irregularidad de su espira; por lo demas basta compararlas para distinguirlas inme- diatamente. Hemos encontrado esta especie, que lo mismo se enrosca 4 derecha que á izquierda, en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y es poco comun. B, Concha prolongada turriculada. GÉNERO 19. VERNEUILINA. — (dOrb.) Concha libre, espiral, prolongada, rugosa. Espira cónica, mui prolongada. Celdillas deprimidas, apiladas en tres líneas distintas, cada una carenada al rededor del eje longitudinal. 4bertura en hendidura transversal, situada en la parte interna de la última celdilla y sin válvula opercular. (Monizes, по 104, 5e livraison.) Relaciones y diferencias. La forma exterior de oste género es análoga á la de las Valvulinas prolongadas y triangulares ; su enroscamiento espiral es el mismo, pero la abertura en lugar de estar protejida por una válvula opercular, es sencilla y formada tan solo de una hendidura trans- versal bajo el borde interior de la última celdilla, como se ve en las Textularias en las Ena- lostegas. No las conocemos hasta la presente mas que de la creta blanca de las cercanías de Paris. FORAMINIFERAS. 109 GÉNERO 20. BULIMINA. — (tOrb.) Concha libre, espiral, turriculada. Espira prolongada. Celdillas sucesivas sobre un eje espiral re- gular cubriéndose mas ó menos; poco salientes ; la última no prolongada en tubo. 4bertura lon- gitudinal al eje; virgular ó redondeada, lateral en el costado interno ó cerca del ángulo superior de la última celdilla. (Морѓікѕ, n° 9, 1'е livraison, y по 68, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Estas conchas, á las que hemos llamado Bulimina 4 consecuencia de su semejanza con los BuLmus por la prolongacion espiral y el aspecto, se distinguen de las Valvu- linas por la falta de válvula en su abertura, lo mismo que por la diferente posicion de esta aber- tura, que colocada transversalmente sobre la misma vuelta de la espira en las Valvulinas, es por el contrario longitudinal en las Buliminas. Se distinguen de las Uv1cerIxa por la falta de prolon- gacion en la última celdilla y por el sitio de la abertura. Hemos examinado comparativamente mas de veinte y siete especies de este género, que encon- tramos repartidas como sigue : Especies vivas, doce en el Adriático, una en Madagascar, una en las Antillas, una en Patagonia, dos en el Perú y una en Tenerife. De aquí se sigue que las Buliminas vivas son casi de todos los mares. Especies fosiles , tres de los terrenos terciarios subapeninos de la Italia, una sola de Dax y ninguna hasta ahora del depósito parisiense ni de el de la Turena; pero lo que nos ha admirado es el encontrarlas en la creta blanca de Paris y de Inglaterra, en la que hemos obtenido cuatro especies. No poseemos mas que una de Cuba. N° 56. BULIMINA AFFINIS. — (407b.) LAM. П, FIG. 25 y 26. Borma. Testa oblongo-ovala, leevigata, alba, postice subacuminala; spira brevi, anfractibus quatuor subplanis; loculis convexiusculis per quamque spi- ram trinis. Apertura virgulari. Dimensiones. Longitud total... sd ДИНО у олия |a millim. Concha ablonga, oval, opaca, lisa, un poco adelgazada por detras. Espira bastante corta, com- puesta de cuatro vueltas mui poco convexas, separadas por una sutura mui poco marcada. Celdillas tres por vuelta de espira, mui poco convexas; la última un poco aplastada y aun lijeramente esca- vada. Abertura virgular, colocada en la parte superior y cerca de la vuelta de la última celdilla. Color blanco. Ш Vecina de la Burmusa lævigata y de la B. elegans de Rimini, esta especie se distingue por la lijera depresion de su última celdilla, lo mismo que por sus vueltas de espira menos desprendidas. No hemos encontrado mas que un solo individuo en la arena de Cuba. 110 FORAMINIFERAS. GÉNERO 21. UVIGERINA. — (4Orb.) Concha libre, espiral, turriculada. Espira prolongada. Celdillas mui salientes, globulosas, for- mando un racimito en su totalidad; la última prolongada en tubo. Abertura central, redonda, colocada en la parte superior de las celdillas en la extremidad de la prolongacion. (MokLEs, по 67, 8° livraison.) Relaciones y diferencias. Hemos llamado а este género UvicerINA en razon á su semejanza con un racimito de uvas cuyos granos figuran las celdillas; se distingue de las BuLmixa en que la última celdilla en lugar de estar cerrada y tener la abertura virgular y lateral, se prolonga en un tubo cuya extremidad forma la abertura siempre redonda y central. Conocemos nueve especies : cinco vivas, de las cuales dos del Adriático, una de Tenerife, una de las Antillas y una de Patagonia; cuatro fosiles, de las cuales dos de los terrenos terciarios suba- peninos de Sienna, en Italia, una del depósito terciario de Burdeos y una de la creta blanca de las cercanías de Paris. N° 57. UVIGERINA AUBERIANA. — (40r0.) LAM. П, FIG. 23 y 24. UvicerINA. Testa oblongo-conica, rugoso-aspera, albida; spira, elongata, conica, anfraclibus quinis convexis loculis globulosis, per q duobus; apertura rotunda, elongata. que spiram Dimensiones. Longitud tofal.......o...... Pano EN "з de millim. Concha oblonga, un poco cónica, obtusa inferiormente, mui rugosa, cubierta de asperezas tanto mejor marcadas cuanto mas se acercan á la extremidad de la espira. Espira prolongada, mui dis- tinta, compuesta de cinco vueltas bien separadas, compuestas cada una de dos celdillas solamente. Celdillas mui convexas, globulosas ; la última convexa y prolongada en tubo. Abertura redonda, colocada en la extremidad del tubo. Color blanco. Esta especie por sus rugosidades y su forma cónica se acerca mucho а nuestra UvIGERINA ru- gosa que hemos encontrado fosil en las cercanías de Sienna, en Italia; pero despues de haberlas confrontado hemos conocido que difieren una de otra en que la Uvigerina de Auber tiene dos celdillas por vuelta de espira, mientras que la Uvigerina rugosa tiene tres; diferencia que se halla en todos los individuos. La hemos encontrado en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Ja- maica y Martinica, que debemos á M. Fernando de Candé: es bastante rara. FORAMINIFERAS. 111 GÉNERO 22. PYRULINA. — (d'Orb.) Concha vitrea y lisa, libre, espiral. Espira corta, poco distinta. Celdillas semi-envolvientes, poco separadas ; la última acuminada por delante. 4bertura redonda, en la extremidad de la última ca- vidad. (Mopkzes, по 30, 2° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género forma evidentemente el paso entre las Guttulinas y las Uvigerinas; como en las primeras, su contextura es vitrea, su última celdilla es siempre acuminada y no en sifon; pero se distingue por sus celdillas formando una verdadera espira y no una alter- nativa; como las segundas, es espiral, distinguiéndose al mismo tiempo por su contextura vitrea, por su última celdilla acuminada y sencillamente barrenada de un agujerito en lugar de estar pro- longada en sifon. No conocemos mas que dos especies fosiles, una de los terrenos terciarios subapeninos de Castel-Arcuato (Italia), la otra de la creta blanca de las cercanías de Paris. 2 DIVISION. Muchas aberturas. GÉNERO 23. CANDEINA. — (dOrb.) Concha libre, espiral, cónica, lisa, no acribillada de agujeritos. Espira regular, oblicua, tro- choide. Celdillas numerosas, esféricas. 4berturas numerosas, colocadas en líneas en contorno de la vuelta de la última celdilla. (Mopkzes, по 105, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Por sus celdillas globulosas esféricas, este género tiene relacion con las Globigerinas; sin embargo, hemos debido separarlo por su contextura vitrea, brillante, no rugosa y perforada, por su espira mas prolongada, mas regular y sobre todo de un caracter único hasta ahora en las conchas turbinadas vivas, caracter que consiste en el gran número de aber- turas de su última celdilla. No tenemos hasta ahora mas que una sola especie de las Antillas. Dedicamos en testimonio de nuestro agradecimiento este género á М. Fernando de Candé, al que debemos la mayor parte de arenas de las Antillas, en que hemos practicado nuestras investigaciones. N° 58. CANDEINA NITIDA. — (40r0.) LAM. и, FIG. 27 y 28. CANDEINA. Testa elevato-conica, leevigata, lucida, alba; espira elevata, conica, anfractibus quinis; loculis tribus spheericis; aperturis numerosis. 112 FORAMINIFERAS. Dimensiones. Diámetro....... тоу - 3 puntos... o... ые е. "a milime Concha mui elevada, cónica, lisa, brillante, translucida. Espira saliente, cónica, compuesta de cinco vueltas y formada de trece ó catorce celdillas. Celdillas esféricas, mui separadas, tres en cada - vuelta, siempre regularmente colocadas unas encima de otras de modo que representan en su tota- lidad tres series verticales de celdillas creciendo regularmente de las primeras á las últimas. 4ber- tura : no hemos reparado en ninguna abertura central ; pero en la vuelta de la espira la última cel- dilla está calada de seis á siete aberturitas en el borde. Color blanco transparente. Hemos encontrado esta concha, única en su género, en la arena de Cuba y enla de la Jamaica : es mui rara. GÉNERO 24. FAUJAS A. — (dF'Orb.) Concha libre, espiral, deprimida, trochoide, inequilátera. Espira rebajada, aparente por encima, envolviente por debajo. Celdillas comprimidas, carenadas, arqueadas, provistas de fosetas transver- sales entre las suturas. 4berturas numerosas, esparcidas, situadas en la parte superior de la úl- tima celdilla y mostrándose aun abiertas en las fosetas suturales de las últimas celdillas. (Морёгкз, по 106, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. Las Faujasinas son respecto de las conchas inequiláteras espirales lo que las Polystomelas respecto de las equiláteras ; es decir, que difieren de los demas géneros por el caracter singular de que las fosetas vuelven á representar las aberturas en las otras celdillas y así se las puede reconocer en las fosetas de la superficie. No conocemos mas que una sola especie fosil de la creta superior de Maestricht (la Fausastya carinata ). Hemos dedicado este género al sabio Faujas, que es el que mas se ha ocupado de aquella importante localidad. GÉNERO 25. CHRYSALIDINA. — (d'Orb.) Concha libre, pupeeforme, cónica, lisa. Espira prolongada, mui estrecha, poco regular, aumen- tando por graditas colocadas en tres líneas longitudinales. Celdillas mui numerosas, deprimidas, estrechas, apiladas en tres ejes mui regulares y uniéndose entre sí por una alternativa semejante á la de las Texrunarta. Aberturas mui numerosas, redondas, ocupando la parte alta de las tres úl- timas celdillas. (MonéLes, по 107, 5° livraison.) Releciones y diferencias. Este género anómalo en la serie, puesto que tiene una espira formada de celdillas apiladas en tres ejes y unidas unas á otras por encabestramiento, se distingue de todas las Turbinoideas por sus celdillas estrechas, deprimidas y sobre todo por las tres últimas traspasa- das de muchas aberturas en toda la superficie superior, Este último caracter las distingue de las Candeina, igualmente provistas de muchas aberturas. Esta singular concha no se ha encontrado hasta ahora mas que en la arcilla verde de la embo- cadura de la Charante, de la que es característica. No conocemos mas que una especie, la Crysa- LIDINA gradata, Nob. FORAMINIFERAS. 113 2: SECCION, Concha cambiando de forma; espiral solo en su juventud. GÉNERO 26, CLAVULINA. — (dOrb.) Concha libre, espiral, turriculada en la juventud como las UvIGERINA, pero con las celdillas pro- yectándose despues en línea recta ála manera de las Stichostegas, apilándose en el mismo eje que el de la espira. 4bertura redonda, terminal y central en la extremidad de la última celdilla. (Mo- DELES, По 66, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género difiere de las Buliminas y de las Uvigerinas en que en lugar de estar en todas las edades compuesto de celdillas enroscándose en espiral prolongada, abandona en cierta época este modo de crecer para proyectarse en línea recta como las Ortho- cerinas y Nodosarias. No conocemos aun mas que seis especies de este género, cuatro vivas y dos fosiles. Una viene de Córcega, dos son de la isla de Cuba, la cuarta se encuentra á la vez en el Adriático y en el Mediterraneo, fosil en Castel-Arquato, en los terrenos subapeninos y en Burdeos, la quinta se halla fosil en Italia y la sexta es del depósito terciario de Paris. N° 59. CLAVULINA NODOSARIA. — (d'Orb. LAM. 11, FIG. 19, 20. Cravunia. Testa elongata, subcylindrica, rugosa, albida; spira brevi, obtusa; anfractibus tribus; loculis nodulosis; aperlura rotunda. Dimensiones, Longitud .. 3 puntos. "Ja millim. Concha prolongada, cilíndrica, derecha, lijeramente rugosa, obtusa en sus extremidades ; sin embargo, adelgazada en su extremidad inferior. Espira ocupando la cuarta parte de la Jongitud total, mui obtusa y poco distinta, compuesta de tres vueltas formadas cada una de tres celdillas. Celdillas poco convexas en la base, despues convexas nodulosas en la parte no espiral, y enton- ces separadas por grandes estrecheces. Abertura redonda, sin salida en la convexidad de la última celdilla. Color blanco. А lo primero hemos referido esta concha á nuestra CravuLisa communis, pero comparando estas dos especies hemos reconocido que ésta de adulta tiene la cuarta parte del tamaño de la otra y que sus celdillas son mas distintas en toda la parte espiral, lo que nos ba determinado á consi- derarla como diferente. La hemos encontrado en la arena de Cuba y de la Martinica, donde es mui rara. 114 FORAMINIFERAS. № 60. CLAVULINA TRICARINATA. — (оф) LAM. IL, FIG: 17 y 18. CLAVvuLINa. Testa elongata, tricarinata, rugosa, flavescenle; spira brevi, tricarinata, anfractibus tribus; loculis numerosis, angulatis, angulo aculo; apertura rotunda, nec prominente, unidentata. Dimensiones. Longitud .......... ОТ б раш АЕ 1 millim. Concha prolongada, recta, marcada de puntos espaciados, tricarenada, los ángulos agudos, acu- minada por detras, truncada por delante. Espira ocupando la quinta parte de la longitud de la concha, tricarenada y compuesta de tres vueltas poco distintas. Celdillas numerosas, apiladas sin mucho cubrimiento, sesgadas inferiormente entre cada ángulo ; la última redonda, convexa, sin prolongacion. Abertura en forma de erradura, es decir, redonda y provista en el lado de un diente bastante largo. Color amarillento uniforme. Esta especie se parece mucho por su contextura y por sus tres carenas á nuestra CLAVULINA an- gulata del Mediterraneo. A primera vista seria fácil confundirlas; sin embargo, la que nos ocupa se distingue fácilmente de la otra en que su última celdilla no está prolongada en sifon por la aber- tura y que su abertura está provista de un diente, mientras que solo es redonda en la otra. La hemos encontrado en la arena de la isla de Cuba, comunicada por el Sr. dela Sagra, y en la de la Jamaica, traida por M. de Candé; parece mas rara en esta última isla. GÉNERO 27, GAUDRYINA. — (2 Orb.) Concha libre, tricarenada en la juventud, comprimida en la edad adulta, rugosa. Espira prolon- gada, trochoide. Celdillas á lo primero enroscadas en espiral, despues á cierta edad haciéndose al- ternasen dos líneas opuestas, como en las Enalostegas textularideas. Abertura transversal en hendi- dura sobre la vuelta misma de las celdillas. (Montes, по 108, 5° livraison.) Relaciones y diferencias. En la juventud la forma exterior es la misma que en las Valvulinas triangulares; pero las celdillas lejos de continuar enroscándose en espiral al rededor de un eje longitudinal, se hacen de repente regularmente alternas por cada lado de este eje como en las Textularias y continuan así mientras dura el crecimiento › de manera que esta concha constituye entre las Turbinoideas y las Enalostegas el mismo paso que las Clavulinas entre las Trochoideas y las Stichostegas, anomalía notable en que siempre se verifica de lo compuesto á lo simple y no de lo simple á lo compuesto. No conocemos mas que una sola especie de este género, propia de las capas de creta blanca del depósito parisiense. ORDEN 42. ENTOMOSTEGAS (). — (20%) Caracteres. Geldillas reunidas por alternativa regular 6 по, apiladas en dos solos ejes distintos que se enroscan juntos en espiral regular. Espira oblicua ó enroscada en el mismo plano. El modo de crecer de estas conchas ofrece una singular mezcla de el de las Enalostegas de celdillas alternas y del enroscamiento espiral de las Helicostegas, lo que nos ha determinado á colocarlas entre estos dos órdenes como seccion de un valor igual. En efecto, si no se considera mas que el crecimiento de una corta serie de celdillas se verá que se suceden por alternativa re- gular, viniendo cada una de ellas despues de la otra y alternativamente por cada lado á apilarse en dos ejes distintos, iguales ó desiguales ; pero si en lugar de limitarse á examinar una corta serie de celdillas se considera su conjunto, se ve que la reunion de los dos ejes de las celdillas se con- tornea en espiral de las mejor caracterizadas, sea en un mismo plano, como las Nautiloideas, sea oblicuamente, como las Tarbinoideas. En resúmen, las Entomostegas segun las consideramos hoi dia difieren, conforme lo acabamos de decir, de las Stict y de las Heli gas por la alternativa de sus celdillas; de las Enalostegas por su conjunto que se enrosca en espiral, y de las Agathistegas por un modo de formacion del todo diferente. Este órden nos presenta dos modificaciones principales; en la primera los lados no son iguales, componiéndose la alternativa de dos series desiguales de celdillas, la una compuesta de pequeñas celdillas que ocupan solamente la mitad ó un poco mas de el ancho de uno de los lados, la otra compuesta de celdillas cubriendo no solo el resto del lado donde están las celdillas pequeñas, sino tambien por entero el lado opuesto: esta primera serie formará nuestra familia de las 4ste- rigerinideas, representando las pequeñas celdillas casi siempre una estrella ó una roseta en medio de las otras. La segunda modificacion comprende las conchas de lados iguales cuya alternativa de celdillas se verifica lo mismo á un lado que al otro. Esta será nuestra familia de las Cassidulinideas. Las secciones secundarias serán en este órden mui poco numerosas, puesto que el número de 1 De + corte, y de 116 FORAMINIFERAS. géneros está aun mui restrinjido: así, en la primera familia cuando la espira es aparente solo por un lado, trochoide б rebajada, son nuestra 4sterigerinas; cuando la espira es envolviente б visible por los dos lados y las celdillas sencillas, son nuestras 4mphisteginas; cuando están cortadas al traves, son nuestras Heterosteginas. En la segunda familia no tenemos mas que un género. El cuadro siguiente presenta la totalidad de caracteres propios de las secciones de este órden. ENTOMOSTEGAS. Espira aparente рог un solo 1айо.................... ASTERIGERINA. PRIMERA FAMILIA. [ Dos series de celdillas solamente, me VIDE cortadas á lo largo; espira envol- OS Espira igual por los dos : РЕР чїеме......... . + ÁMPHISTEGINA. Lados desiguales, fotis alternativa de celdillas Celdillas compuestas, cortadas al desiguales. \їгауез........ зз. A +. HETEROSTEGINA. SEGUNDA FAMILIA. CASSIDULINIDE. Lados desiguales, alternativa de celdillas їриа]ез........................ La contextura de las conchas de este órden es uniforme, compacta, vitrea, casi siempre mui lisa, mui brillante; no nos ha mostrado poro alguno de los que son tan numerosos en la Helicostegas turbinoideas. Los pasos que existen entre este órden y el que le precede, bien se deja conocer que no pueden ser mas sencillos y evidentes : 1° Por la alternativa de las celdillas de todos los géneros tiene analogía con todas las Ena- lostegas. 20 Por el enroscamiento espiral de todos los géneros tiene analogía con las Helicostegas, por las Asterigerinideas con las Turbinoideas, por las Cassidulinas con las Nautiloideas, así el paso es simplemente binario, no radiante como en los otros órdenes. La distribucion actual de los géneros de Entomostegas coloca hasta la presente las Asterigerina en las costas de las Antillas y de la Patagonia, б por mejor decir solo en el nuevo mundo, en el Oceano atlántico. Las 4mphistegina no se han mostrado mas que en las islas cálidas, esparcidas en el seno de los mares, en las Antillas, en las islas oceanias, en la isla de Francia, en Santa Elena y Madagascar. Las Heterostegina están en un todo repartidas como las Amphisteginas; las Cassi- dulina son del Mediterraneo y de la costa de Patagonia: así casi todos estos géneros son propios de las regiones calientes ó templadas de los Oceanos. Si descendemos álas capas que componen la corteza terrestre, veremos en los terrenos terciarios Asterigerinas en el depósito bordeles, 4mphisteginas en el mismo depósito y en las capas terciarias modernas de las cercanías del estanque de Thau, cerca del Mediterraneo. Las capas cretaceas nos han ofrecido solo una especie de 4mphistegina en la creta superior de Maestricht, lo único á que por lo demas se limitan las fosiles de esta serie, á las que no encontramos de modo alguno en la formacion oolítica ó jurásica. Abrazando el conjunto numérico de especies que conocemos encontramos solamente diez y nuevo, y de ellas quince vivas, asi repartidas: cuatro en las Antillas, dos en las islas de Sandwich, dos en 1а isla de Santa Elena, dos de Patagonia, despues una en cada una de las localidades siguiente Rawack, isla de Francia, Madagascar, India y Mediterraneo. FORAMINIFERAS. 117 1 Entre las especies fosiles, tres son de los terrenos terciarios, dos de Burdeos, una del estanque de Thau y una de los terrenos cretaceos superiores de Maestricht. Nada mas sencillo que la historia de este órden. Ninguna especie era conocida antes de 18251, época en la que hemos presentado á la Academia de ciencias nuestro trabajo sobre las Foramini- feras; entonces formamos la familia de las Entomostegas, en la que habiamos reunido todas las conchas cuyas celdillas están divididas en muchas cavidades; pero despues habiendo examinado mas atentamente el modo de crecer de estas conchas hemos debido naturalmente reformar esta seccion, remitir á las Helicostegas los géneros Orsicuava y ALVEOLA, á las Agathistegas las FABULARIA, y no conservar con el nombre de Entomostegas mas que los géneros AMPHISTEGINA, HererosTEGINA y Cassiunma, á los cuales hemos unido el de ASTERIGERINA, todos cuatro compuestos de conchas formadas de celdillas simultaneamente alternas y aspirales. Tenemos en Cuba cuatro especies, así repartidas por familias y por géneros. Céxenos. NuxEno POR GÉNERO, NUMERO ror FAMILIA: ASTERIGERINA ГАМЕ А$ТЕМСЕВ1МИрЖ......,, AMPHISTEGINA ........ 1 4 ЕхтомоѕтЕСАЅ.......... HETEROSTEGINA ....... 1 CASSIDULINIDE.......... CASSIDULINA +... .0.... » 5 4 4 Resulta que no falta en la isla de Cuba mas que un género de este órden. 1° FAMILIA. ASTERIGERINIDAE. — (40r0.) Concha libre, regular, inequilátera. Espira regular, oblicua, envolviente д no. Celdillas cuya alternativa solo se verifica por un lado. 1° SECCION. Espira aparente solo por un lado, el otro envolviente. GÉNERO 1°. ASTERIGERINA. — (40rb.) Concha libre, espiral. Espira enroscada de lado, aparente por encima, envolviente por debajo, compuesta por arriba de celdillas únicas, por debajo formada hasta la mitad de su longitud por 1 Tableau method. des Céphal., Annales des Sciences naturelles, enero, 1896. 118 FORAMINIFERAS. la continuacion de las celdillas superiores y por otras celdillas formando estrellas y viniendo á al- ternar con éstas en el crecimiento de la totalidad. Celdillas de dos clases ; las celdillas ordinarias espirales superiores, las celdillas inferiores medianas, sirviendo para formar una estrella central y viniendo cada una de ellas alternativamente despues de la otra. Abertura en el costado de la última celdilla. (Monkres, по 39, 2° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género, parecido en todo por arriba á las Rotalinas, viene á for- mar entre estas conchas y los otros géneros de Turbinoideas una anomalía semejante á la que encontramos en nuestras Cassiduli entre las Nautiloideas; en efecto, su espira en lugar de estar formada de un solo apilamiento de celdillas colocadas unas sobre otras, está realmente com- puesta de dos series distintas de celdillas alternando entre sí, una ordinaria superior, otra inferior central, representando una estrella mas ó menos regular ; así este género entre las con- chas espirales viene á mostrarnos un modo de crecer análogo al que hallamos en nuestras Ena- lostegas; pero si estuviese colocado entre las conchas de este órden, aun formaria una anoma- lía mucho mayor á ia de su enr i espiral. Por estas consideraciones nos he- mos creido autorizados á crear una nueva seccion para él y los géneros siguientes, que reunen á la vez los caracteres de nuestras Enalostegas y los de las Helicostegas. Al tiempo de nuestra primera publicacion no conociamos mas que una especie de este género; la habiamos dejado entre las Rosalinas, representándola en nuestros modelos; pero hoi dia que publicamos cuatro especies distintas tenemos la certidumbre de que estas conchas forman un grupo perfectamente caracterizado. De estas cuatro especies, dos son propias de las Antillas y de Cuba en particular, una de Patagonia ; la cuarta es fosil en los terrenos terciarios de las cercanias de Burdeos. N° 61. ASTERIGERINA CARINATA. — (tOrb.) LAM. V, FIG. 25; LAM. VI, FIG. 1 y 2. ASTERIGERINA. Testa orbiculari, alba, punctata, supra complanata, subtus convexa, marginata; margine carinata, integra; spira plana, anfractibus tribus; loculis obliquis, suturis complanatis. Dimensiones. Ютейо.............. 3 puntos... «Ya millim. Concha suborbicular, casi plana por encima, convexa y subcónica por debajo, lijeramente pun- teada; su contorno entero, fuertemente carenado y cortante, lijeramente orillado por abajo. Espira deprimida, plana, compuesta de tres vueltas. Celdillas inferiores reunidas en ángulos rectos y for- mando en su totalidad una estrella cuyas puntas son regularmente angulosas y anchas sin estar separadas por ninguna sutura profunda. 4bertura en media luna. Color blanco. Esta especie es seguramente vecina de nuestra Asreniceniva monticula de Patagonia por sus celdillas no salientes y por su forma carenada, distinguiéndose al mismo tiempo por el ribete de su borde inferior. Esta linda concha se ha encontrado, sin ser comun, en las arenas de la isla de Cuba y de la Jamaica, que debemos á los señores de la Sagra y de Candé, FORAMINIFERAS. 119 № 62. ASTERIGERINA LOBATA. — (40rb.) LAM. V, FIG. 19, 24. ASTERIGERINA. Testa orbiculata, alba, punctata, supra subcomplanata , subtus convexiuscula, margine subcarinata; anfractibus quatuor distinctis ; loculis obliquis, convexis, suturis excavatis. Dimensiones. Diámetro - 3 puntos.. Ya millim. Concha suborbicular, casi plana por encima, poco convexa por debajo, lijeramente punteada ; su contorno recortado en feston por las celdillas y apenas carenado, sin ribete. Espira mui depri- mida, un poco convexa, compuesta de cuatro vueltas bien distintas. Celdillas superiores, oblicuas, mui arqueadas, un poco convexas, formando cada una un feston marginal en el contorno de la concha; en número de ocho en la última vuelta ; celdillas inferiores estrechas, reunidas en ángulo recto, formando una estrella de puntas agudas y rectas. Las suturas entre las celdillas son profun- das. Abertura en hendidura poco prolongada. Una variedad nos ha mostrado un disco en el centro de la reunion de las celdillas en la estrella; pero este caracter nos ha parecido que no de- bia constituir una especie diferente, siendo absolutamente los mismos los demas detalles de formas. Color blanco. La Asterigerina recortada se distingue de todas las demas por la salida en festones de sus cel- dillas en su contorno, teniendo las otras esta parte entera. Hemos encontrado esta especie, en pequeño número, en la arena de la isla de Cuba, traida por D. Ramon de la Sagra. 2: SECCION. Espira envolviente ó no por los dos lados. GENERO 2°. AMPHISTEGINA. — (d'0Orb.) Concha discoidal, libre, espiral, 1 ilátera, mas abombada de un lado que de otro. Espira envolviente, compuesta por arriba de celdillas únicas, formada por abajo en la mitad de su latitud por la continuidad de las celdillas superiores y por otras celdillas constituyendo una roseta. Celdi- llas de dos clases: las celdillas ordinarias envolvientes superiores ; las celdillas inferiores medianas, sirviendo á formar una roseta central y alternando las dos ер el crecimiento de la totalidad. 4ber- tura inferior, es decir, del lado de la roseta, en el lado de la última celdilla, alternativamente en la una y en la otra. ( Mopètes, пе 98, 4° livraison, y по 40, 2° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género nos ofrece en un todo por encima los caracteres de las Nautiloideas ordinarias por sus celdillas envolvientes ; por debajo se parece por sus celdillas al- ternas formando roseta á esta misma parte en las Asterigerinas; así no difiere de este último género mas que en ser por arriba sus celdillas envolvientes en lugar de estar enroscadas oblicua- 120 FORAMINIFERAS. mente у trochoides. Difiere de las Heterostegas y de las Asterigerinas por sus celdillas frecuen- temente divididas por separaciones á lo largo. Este género singular parece que une las Nautiloideas (Heli gas) а las Enalostegas. Nos ha ofrecido ocho especies, de las cuales seis vivas y dos fosiles. Por una rara singularidad todas las especies vivas son no solo de las regiones calientes de los mares, sino tambien de las islas di- seminadas en el seno de los Oceanos y cada una de su localidad propia, una de Rawack, una de las islas Sandwich, una de la isla de Francia, una de la isla de Santa Elena, una de Madagascar y en fin una de las Antillas y de Cuba en particular. Las especies fosiles conocidas por nosotros son una del depósito terciario de la Gironda y otra de las capas cretaceas superiores de Maestricht. № 63. AMPHISTEGINA GIBBOSA. — (d'Orb.) LAM. ҮШ, FIG. 1, 3. AMPHISTEGINA. Testa suborbiculato-convexa, albescente, minulissime punc- tata, nitida, crassa; subtus convexa, supra complanata, margine ѕифсаті- nata , integra; loculis arcuatis, sinuosis. Dimensiones. DiámelrO.......oooooo.oo. ТШНК боон а */, millim. Concha suborbicular, mui finamente punteada, luciente, transparente, mui densa, de contorno entero, carenado sin ser cortante, convexo por encima y como estriado en la vuelta de la espira, casi horizontal por debajo. Celdillas superiores mui numerosas, mui sinuosas, rectas en la mitad de su longitud, despues inclinadas bruscamente hácia detras, marcadas cada una cerca del codo por una corta separacion longitudinal que las divide en dos partes; celdillas inferiores rectas, ra- diando en la mayor parte de su longitud hasta su union con la extremidad de las celdillas supe- riores y prolongándose en lengueta estrecha y sinuosa entre éstas últimas. Forman en su totalidad una roseta complicada; sus suturas son visibles solamente por transpariencia. 4bertura en media luna contra la vuelta de la espira. Las jóvenes tienen las celdillas mas espaciadas y menos nume- rosas que las adultas ; el enroscamiento espiral está tan pronto á la derecha como á la izquierda. Color blanco, amarillento, lívido ó verdoso. Por su convexidad рог el lado de la roseta se acerca únicamente á la Ampnistecisa Оноу de Rawack, pero se distingue claramente por las celdillas de la roseta sin separaciones medianas, caracter tan pronunciado en la otra especie; difiere todavía por las mismas celdillas, menos sí- nuosas y mas truncadas en su extremidad. La hemos encontrado mui abundante en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la isla de Santo Tomas y de la Jamaica, de que somos deudores á la compla- cencia de M. Fernando de Candé. GÉNERO 3°. HETEROSTEGIN — (@0.) Concha suborbicular, libre, inequilátera, siempre mas abombada de un lado que de otro, mui comprimida, enroscándose en espira envolviente ó no. Celdillas numerosas, arqueadas, enteras FORAMINIFERAS. 121 hácia el centro umbilical, pero divididas en compartimentos en la mitad de su anchura, hácia la parte dorsal, por un gran número de separaciones transversales, aparentes por los dos lados de la concha. Abertura única contra la vuelta de la espira, un poco mas por el lado menos abombado. (MoniLes, по 99, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. Las celdillas divididas transversalmente en la compresion de la concha, acercan este género á las Orbiculinas, de las que se distingue, sin embargo, por su соп- textura vitrea toda diferente, por sus dos lados siempre iguales, por sus celdillas divididas sola- mente en parte de su longitud, en lugar de estarlo igualmente por todas partes, y por una sola abertura en lugar de un gran número. Por otra parte, su contextura, el sitio de su abertura y sus dos lados desiguales le aproximan а las Ampbhisteginas, bien diferentes por sus separaciones longitudinales en las celdillas у por la alternativa de celdillas de uno de los lados; así creemos se deben colocar las Heterosteginas en la misma division de este género, del que tal vez tienen una parte de la alternativa de celdillas. Este género, que hemos establecido en 1825, nos presenta tres especies, todas tres vivas: una del puerto Jakson, de las islas Sandwich y de las islas Marianas, otra de la isla de Santa Elena y la tercera de la isla de Cuba y las Antillas. No 64. HETEROSTEGINA ANTILLARUM. — (d'Orb. LAM. ҮП, FIG. 24 y 25. HererosTEGINA. Testa oyali-compressissima, alba, lucida, levigata, mar- gine subcarinata, loculis numerosis, angustatis, arcuatis; disco umbilical;. .. 2 millim. Dimensiones. Diámetro... er. 1 línea... Concha oval, mui deprimida, lisa, reluciente, algunas veces ondulosa; el lado mas convexo apenas elevado, el otro casi plano; contorno mui comprimido, entero, formando una carena truncada mui lisa. Espira envolviente por entero. Celdillas mui numerosas, sumamente arqueadas, divididas solo en la mitad de su longitud, lo demas representando en su totalidad una linda roseta en el centro de la cual hai un disco bastante pequeño. Color blanco uniforme. Vecina de nuestra Hererosrrcina orbicularis por sus vueltas de espira envolvientes, esta es- pecie difiere por una compresion lateral mucho mayor y por bastante menos divisiones en sus celdillas. La hemos descubierto en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Jamaica, recojidas por M. Fernando de Candé. Parece que debe ser rara á juzgar por el corto número de individuos que hemos obtenido. 2: FAMILIA. CASSIDULINIDAE. — (dOrb.) Concha libre, regular, equilátera. Espira regular, enroscada en el mismo plano. Celdillas cuya alternativa se verifica por los dos lados. 23 122 FORAMINIFERAS. GENERO 4°. CASSIDULINA. — (d4Orb.) Concha suborbicular, libre, espiral, equilátera. Espira envolviente, compuesta de celdillas alter- nas, sucediéndose regularmente por cada lado, cubriendo una pequeña parte del lado opuesto, lo que presenta en la totalidad un aspecto remendado singular. 4bertura prolongada en el medio de la última celdilla y lateral al eje. Relaciones y diferencias. Este género, uno de los mas singulares entre las Foraminiferas, nos muestra en su totalidad una concha mautiloidea de vueltas envolvientes, en la que cada vuelta en lugar de estar compuesta de una sucesion de celdillas sencillas está formada de un apilamiento alterno de celdillas, cada una de las cuales no ocupando mas que uno de los lados de la concha; así bien diferente de las Asterigerinas y Amphisteginas, cuya alternatiya de celdillas no se verifica mas que en uno de los lados de la concha, éstas la tienen mas regular y por los dos, lo que forma de los primeros géneros testaceos de lados desiguales, mientras que la Cassidulina es casi equilátera. Conocemos dos especies vivas, una del Mediterraneo y otra de Patagonia. ORDEN 50, ENALOSTEGAS (1). — (то) Caracteres. Celdillas reunidas en todo ó en parte por alternativa en dos ó tres ejes distintos, sin formar espiral. El modo de crecer de este órden es mucho menos sencillo que el de los órdenes precedentes; ya no es una sola celdilla como en las Monostegas; ya no es una serie de celdillas apiladas ó so- brepuestas en un solo eje recto ó arqueado como en las Stichostegas, ó sobre un eje espiral como en las Helicostegas : es un modo de composicion del todo diferente. La concha empieza por una bolita oval ó prolongada, horadada de una abertura en cuyo lado viene á fijarse otra segunda celdilla de modo que cubre la abertura, despues á el lado de esta segunda la tercera y así de se- guida; celdillas alternas por cada lado del eje longitudinal, representando en su totalidad dos apilamientos bien distintos encabestrándose de un modo mas ó menos regular, siempre en el sentido longitudinal y sin formar espiral. Encontramos en este órden, compuesto solamente de conchas libres, dos modificaciones cons- tantes primordiales: en la primera, la alternativa de celdillas total ó parcial es irregular, no siendo semejantes las caras opuestas, y desde luego la concha no tiene partes pares y la alternativa se verifica á veces en tres ejes distintos. Esta será nuestra primera seccion, á la que consagrare- mos el nombre de Polymorphinideas. En la segunda, por el contrario, la alternativa de celdillas total ó paralela es mui regular en dos ejes opuestos, las dos caras son semejantes y la concha tiene partes siempre pares. Estas serán nuestras Textularideas. Nos quedan despues las divisiones genéricas en cada una de estas dos familias: en la primera, cuando las celdillas á lo primero apiladas en tres ejes concluyen por estar cubiertas por celdillas apiladas simplemente sobre un solo eje á la manera de las Stichostegas , éstas son nuestras Dr- MORPHINA; cuando estas celdillas en todas las edades están sobre estos tres ejes, son nuestras GurruLixa; cuando el apilamiento de las celdillas se verifica en dos ejes y la abertura es redonda y terminal, son nuestras Porymorpuixa; cuando con el mismo modo de crecer la abertura es vir- gnlar latero-terminal, son nuestras VIRGULINA. 1 De éar, alternativo, y de o 124 FORAMINIFERAS. En la segunda familia, cuando las celdillas á lo primero alternas concluyen por apilarse á la manera de las Stichostegas, son nuestras Bicexerina; cuando la abertura es central, nuestras GEMMOLINA ; cuando la abertura es lateral, las celdillas alternan regularmente en toda edad y no hai mas que una sola abertura y ésta transversal en el lado interno de las celdillas, son nuestras VuL- vVULINA, Ó redonda y saliente, son nuestras Sacriva. Cuando hai muchas aberturas, son nuestras CUNEOLINA. Para hacer comprender mejor estas modificaci las pr en cotejo en el cuadro siguiente. ENALOSTEGAS. AN A | Celdillas á lo primero en tres caras, des- = Alternativa de las cel- / pues proyectadas en linea recta. ........... DIMORPHINA. POO AAD] его. | Celdillas en tres caras en todas ейайев.... GUTTULINA, Concha de lados de- ) № А А SEGUNDA SECOION» semejantes sin partes т Abertura redonda їегшїпаЇ............. PoLYMORPMINA + pares. Alternativa de celdillas \ еп dos caras. Abertura virgular latero-terminal........ VIRGULINA. PRIMERA SECCION , Abertura central ........ пенен BIGENERINA. Abertura lateral., e GEMMULINA. das despues en linea SEGUNDA FAMILIA, \ / 89 f Celdillas alternas en | la juventud, proyecta: | ¿ \ == recta. \ Una abertura. TEXTULARIDA. П Concha de lados se- / Abertura transversal en el lado interno de ales ooh pes жүн ИЛ las celdillas... TEXTULARIA. т Ех Abertura longitudinal por encima de las pares. Celdillas alternas en 6 Е р А КОЛО саа. ОСЕ ненне VULVULINA. odas edades. | Abertura redonda por encima de las celdi- \ \ поз y enla extremidad de una prolongacion, Sacnixa. \ \ NX. Muchas аһегіџгаѕ........ ela ajja ЛУ Кил ТҮ La primera familia de este órden nos ofrece solo algunos pasos entre las secciones genéricas y solo aun en la juventud de las conchas, porque los géneros de la segunda familia son talmente distintos que no puede haber incertidumbre alguna respecto de ellos cuanto á la clasificacion de las especies. Por otra parte, la contextura de la concha es diferente en las dos familias; en efecto, en las Polymorphinideas la testa es vitrea, translucida, lisa por lo regular, mientras que en las Textularideas es por el contrario rugosa, opaca y las mas veces como perforada. El modo de crecer de las conchas de este órden, tan diferente de los otros por la alternativa de celdillas, nos ofrece, sin embargo, algunos pasos lejanos con ellos, sea en el entero desarrollo, sea tambien en la juventud de las conchas. 1° Las Dimorpmxa despues de haberse formado en la juventud de celdillas alternas en tres caras, las BIGENERINA y las GEmMMULINA despues de haberse compuesto de celdillas alternas en dos caras se terminan en la edad adulta por celdillas sobrepuestas sobre un solo eje recto, semejantes á las que componen en toda edad las Stichostegas, y establecen desde luego un paso con este órden. 2° Las GurruLma teniendo las dos últimas celdillas opuestas, у por consiguiente alternas, se componen, sin embargo, de celdillas colocadas en tres caras y representando en cierto modo una FORAMINIFERAS. 125 especie de enroscamiento turbinado incompleto y estableciendo desde entonces el paso entre las l y las Heli El mismo paso es todavía mas directo entre las Gaunry1xa, que des- pues de haberse enroscado en espiral se termina como las TexruLaria por celdillas alternas. Зо La alternativa de celdillas en el enroscamiento espiral de las Entomostegas establece todavía una relacion mas íntima con las Enalostegas. Representaremos desde luego por un paso radiante la analogía que existe entre las Enaloste- gas y los otros órdenes; pero tomando por base el crecimiento primitivo y no el que sobreviene solamente en la edad adulta y que no es debido mas que á una especie de anomalía. Pondremos este órden despues de las Helicostegas, como que forma una serie mas inmediata. mas bien que cerca de las Stichostegas, donde lo habiamos colocado á lo “primero. Paso á las ENTOMOSTEGAS por las CASSIDULINA, las AMPHISTEGINA y las ASTERIGERINA+ 10d El 2 > = ENALOSTE= | Paso *YNITOKIAL) Å VNIVANIDIJ а las HELICOSTEGAS GAS. por las GUTTULINA y las GAUDRYINA. SVOJLSOMDILS SE] Y ова No conocemos los animales de ninguna especie, pero la analogía de contextura y de sistema de abertura nos induce á creer que se parecen á los animales conocidos ; sin embargo, esta forma caprichosa de alternativa de celdillas supone una torsion extraordinaria de las partes para que el animal se prolongue de una а otra. Ahora, si queremos dirijir una ojeada á la distribucion geográfica actual de los géneros de Ena- lostegas vivas, veremos á las Dimorpnrxa restrinjidas hasta la presente al Mediterraneo; las Gurru- LINA habitar en el Mediterraneo, el Adriático, donde son comunes, las costas de Francia en el Oceano, donde son raras, ser mas numerosas en las Antillas y manifestarse todavía en Patagonia; las РогумокрнічА aparecer solo en el Mediterraneo у en las Antillas; las VircuLrwa en las Antillas; las Brcenerma y las бЕммшлхА еп el Mediterraneo y Adriático; las TexruLarra mui comunes en el Adriático, casi lo mismo en el Mediterraneo y en las Antillas, raras en la costa occidental de Africa, en las Canarias y en Madagascar, en la isla de Francia, en Rawack, en la India y en el mar Rojo; las VuLvuLiva solamente en el Adriático y las Antillas; las Sacriva propias hasta ahora de las Antillas. Por lo mismo los géneros tendrán límites mas ó menos restrinjidos y segui- rán las mismas reglas que los Moluscos en su distribucion sobre la superficie del globo. Las Enalostegas fosiles se encuentran en las diversas capas que componen el suelo terrestre, y aun estando profusamente distribuidas pueden todavía estar bien circunscritas. No encontramos especie ninguna de los géneros РімокрніхА, ВісехектчА, GEMMULINA y VULVULINA en el estado fosil. Tocante á los otros, están repartidos así: las GurruLma son comunes en los terrenos terciarios 24 126 FORAMINIFERAS. ` subapeninos de Italia y de Austria; еп los terciarios de la Turena, de Burdeos, de Paris y del crag de Inglaterra, presentando algunas veces sus análogas vivas; son mui raras, pero se encuentran todavía en las capas superiores de la formacion cretacea; las POLYMORPMINA se encuentran absolu- tamente en las mismas circunstancias ; las VircuLiNA по se han encontrado hasta ahora mas que en las capas terciarias subapeninas de Italia y Austria; las Texrurarta mui comunes en los terre- nos terciarios subapeninos de Italia y Austria, en el crag de Inglaterra, tienen con frecuencia sus análogas vivas y existen aun en el depósito de la Gironda y del Adour ; pero sin análogas, faltando del todo en el depósito de París, aunque se presentan en la formacion cretacea desde las capas mas superiores hasta los terrenos neocomienses ; las CuxtoL1xa son de la arcilla verde solamente, y las Sacrixa de la creta Шапса: s Despues de haber dado á conocer rápidamente la distribucion de los géneros de Enalostegas, si abrazamos el conjunto numérico de especies sin consideracion á las formas hallaremos que entre mas de noventa y dos especies que se conocen, veinte y cinco son del Adriático, quince de las Anti- llas, cinco del Mediterraneo; inmediatamente despues no vemos mas que vestigios en Patagonia, en Madagascar, en la India, en la isla de Francia, en el mar Rojo y еп nuestras costas del Oceano atlántico. Hemos dicho que las Enalostegas se encuentran en el estado fosil en los terrenos terciarios 7 en la formacion егеѓасеа. En los primeros hai catorce de los terrenos subapeninos de Italia y de las cercanías de Viena, de las cuales siete tienen sus análogas vivas, trece en el depósito de Burdeos y del Adour, doce en el depósito parisiense, quince por lo menos en el crag de Suffolk y solo algunas en los faluns de la Turena. La formacion cretacea nos presenta cuatro especies en la creta blanca de Paris y de Inglaterra, algunas en la creta de polipos de Chavagne (Maine-et-Loire); pero las encontramos ademas en el Gault y en el terreno neocomiense del departamento de Doubs y en la arcilla verde de la embo- cadura de la Charente. No conocemos ninguna Enalostega de la formacion oolítica. La historia de este órden se limita á poca cosa. Linneo, Gmelin, Lamarck, no tenian conoci- miento de ninguna especie; Soldani el primero figuró algunas con el nombre general de PoLxmor- ршом y de Orrnocerariun, aplicado á casi todas las conchas; pero Lamarck y Montfort no han tenido cuenta con ello. MM. Defrance y Blainville han visto dos especies que colocaron en el gé- nero TexruLarra del primero de estos dos sabios, y despues de Soldani fueron los únicos á indicar una concha de celdillas alternas, pero sin reconocer las verdaderas relaciones: á estas solas no- ciones se limitaba el estudio de las Enalostegas cuando en 1825 publicamos nuestro cuadro de los Cephalopodes, en el cual como familia de las Foraminiferas hemos clasificado los géneros y especies de las Enalostegas poco mas ó menos como en el dia; solamente hemos creido que debian colo- carse despues de las Helicostegas, en lugar de ponerlas delante, para establecer una serie mas regular en la disposicion general, lo que nos ha obligado á invertir el órden que habiamos adoptado primitivamente. Las únicas mudanzas que hemos introducido en las divisiones son las siguientes : hemos considerado las Polymorphinas como género en vez de subgénero distinto; lo mismo he- mos hecho respecto de las Gemmulinas y Bigenerinas y hemos añadido dos géneros nuevos con los nombres de Sacriva y CUNEOLINA, despues hemos considerado como familia á las dos secciones que а lo primero habiamos establecido en la totalidad, no habiendo nuestras observaciones mo- dificado en lo mas mínimo nuestro sistema de estos cuerpecitos. Tenemos en Cuba solamente quince especies, así repartidas por familias, por géneros y sub- generos. FORAMINIFERAS. 127 Ё Суттрілма.. ьа GUTTULINA ........ Аи 1 POLYMORPHINIDA ........ ШИНЕ 7 | POLYMORPHINA 3 \ ава е? Ж TEXTULARIA + + 6 MA AN 1 8 SAGRINA:... 1 15 15 Este cuadro comparado al de la página 124, prueba que no faltan en Cuba, de las Enalostegas, mas que los géneros DmorpmNa, BIGENERINA, GEMMULINA y CUNEOLINA. 1* FAMILIA. POLYMORPHINIDAE. — (40r0.) Concha libre, irregular, inequilátera, compuesta de celdillas alternas, pero по pares en sus partes por verificarse la alternativa en dos б tres ejes dis- tintos” Contextura de la concha vitrea, translucida, las mas veces brillante. 1* SECCION. Alternativa de las celdillas en tres caras. GÉNERO 1°. DIMORPHINA. — (40ró.) Concha libre, inequilátera, vitrea, oblonga. Celdillas que empiezan por colocarse en alternativa en tres caras como las Guttulinas, despues cesando en cierta edad de alternar y apilándose á la manera de las Stichostegas, es decir, sobre un solo eje longitudinal. 4bertura única, redonda, si- tuada al extremo de la convexidad de la última celdilla. (MopéLes, по 60, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género empieza 4 crecer absolutamente como las Guttulinas ; pero se distingue en que á cierta edad cambia súbitamente el modo de crecer y se prolonga en celdillas sobre una sola línea. No contiene todavía mas que una especie del Mediterraneo. 128 FORAMINIFERAS. GÉNERO 2°. GUTTULINA. — (d'Orb.) Concha libre, inequilátera, vitrea, oblonga, romboidal ó globulosa. Celdillas envolvientes ó no, alternando en tres caras distintas. 4bertura redonda en la extremidad de la última celdilla. (Mo- DBLES, п9 61, 62 y 63, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Idénticas á las Polymorphinas por su contextura vitrea, brillante, las Guttulinas difieren en que en las Polymorphinas todas las celdillas son aparentes y alternan en dos caras, mientras que son mas б menos envolvientes y en tres caras en las Guttulinas. Las subdividimos en dos subgéneros. 1° SUBGÉNERO+ GUTTULINA. — (d'Orb.) Concha libre, inequilátera, vitrea, oblonga ó romboidal, comprimida ó globulosa. Celdillas en gran parte envolvientes, alternando en tres caras distintas, determinando por la preponderancia de volúmen de las celdillas sucesivas y su extension recubriendo, una especie de espiral obscura y poco caracterizada. Abertura redonda al extremo de la última celdilla. (Морѓёгеѕ, по 61 y 62, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Este subgénero constituye evidentemente el paso de las conchas tur- binoideas á las especies alternas, puesto que las celdillas representan todavía algo de espiral sin embargo de alternar; en efecto, estos dos caracteres diferentes se encuentran en la misma concha. Si se considera el conjunto de las celdillas se nota que vienen siempre á colocarse en tres caras opuestas no siguiéndose, de modo que las dos últimas estén siempre opuestas y por consiguiente alternas, y que aperezcan siempre cinco celdillas aun cuando sean totalmente envolvientes; es decir, del lado convexo dos de las antiguas en medio de las dos últimas, y del lado deprimido una sola celdilla en medio de éstas dos últimas. La figura que hemos dado de este singular creci- miento * le hará comprender mejor que una descripcion. Este subgénero difiere de las Globulinas en que presenta cinco celdillas en lugar de tres. Tenemos quince especies así repartidas : vivas, mui numerosas en el Mediterraneo y el Adriá- tico, raras en las Antillas; fosiles, comunes en los terrenos terciarios de Italia, de Viena en Austria, en los de Burdeos, de Paris у de 1а Turena, en el crag de Inglaterra у en las capas cre- taceas de Paris. Entre estas especies muchas tienen sus análogas vivas. La isla de Cuba nos ofrece dos especies. No 65. GUTTULINA VITREA. — ( d'Orb.) LAM. 1, FIG. 1, 3. Gurrunina. Testa oblonga, levigata, translucida , vitrea, alba, antice acu- 1 Véase el Tableau method. des Céphal., Annales des Sciences naturelles, t. VI, lám. 12, fig. 4. FORAMINIFERAS. 129 minata , postice obluso-rotunda; loculis obliquis, oblongis; suturis planis; apertura rotunda, radiata. Dimensiones. Longilad.....ooomommom.... NAS T 1/3 de millim. Concha oblonga, mui lisa, brillante, translucida como cristal, mui acuminada por delante, mui obtusa por detras, convexa por un lado, mui deprimida y casi llana por el otro. Celdillas cuatro, oblicuas, poco distintas, sobre todo las primeras que no están separadas por sutura alguna pro- funda, siendo las divisiones solo visibles por transpariencia ; la última celdilla sumamente prolon- gada en punta. Abertura pequeñita, redonda, colocada al extremo de la salida de la última celdilla y rodeada de rayos divergentes poco prolongados. Color blanco. Esta especie se aproxima del todo por su forma á nuestra GurruLixa caudata, distinguiéndose al mismo tiempo por la falta completa de punta posterior. La hemos descubierto en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra, y en las de la Jamaica, que debemos á la condescendencia de M. Fernando de Candé. N° 66. GUTTULINA PULCHELLA. — (d'Orb.) LAM. П, ЕС. 4, 6. GUTTULINA. Testa oblongo-elongata, translucida, alba, longitudinaliter striata, antice acuminata, postice obtusa; loculis quinis elongatis, suturis excavatis; apertura rotunda. Dimensiones. Longitud total... s... as.. aane e в de millim. Concha prolongada, translucida, vitrea, marcada á lo largo por estrías espaciadas, poco pro- fundas; mui acuminada por delante, obtusa por detras, convexa de un lado y comprimida del otro. Celdillas cinco, todas prolongadas, longitudinales ó un poco oblicuas, salientes como gotillas unas sobre otras, separadas como lo están por suturas profundas; la última mui acuminada en su extremidad. 4bertura sin radios al rededor. Color blanco. No conocemos especie alguna que pueda compararse á ésta, así por la prolongacion como por las estrías de que está adornada. Hemos descubierto esta especie en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, lo mismo que en las de la Martinica, que M. de Candé nos ha comunicado. 2 SUBGÉNERO. GLOBULINA. — («'Orb.) Concha libre, inequilátera, vitrea, subesférica ú oblonga. Celdillas del todo envolvientes, glo- bulosas, alternando en tres caras distintas; tres de ellas solo aparentes. 4bertura redonda al ex- tremo de la convexidad de la última celdilla. (Monézes, по 63, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Este subgénero difiere de las Guttulinas en que solo tres celdillas en 25 130 FORAMINIFERAS. vez de cinco están aparentes en todas edades, lo que proviene sin duda del modo con que estas conchas se cubren envolviéndose, y la última ocultando siempre á la tercera. Esto al menos debe ser, pues en centenares de individuos de cada especie que hemos observado constantemente las hemos encontrado en el mismo número. Hemos observado catorce especies de esta division, encontradas vivas en las arenas de las | costas del Oceano y del Mediterraneo en Francia, del Adriático, de las Antillas y en Patagonia. Son mui comunes en el estado fosil, sobre todo en los terrenos terciarios subapeninos de Italia y de Austria, en el crag de Inglaterra, en los depósitos terciarios de Paris, de Burdeos, de la Tu- rena y de la Bélgica. Las encontramos ademas en las capas cretaceas superiores. La isla de Cuba no nos ha ofrecido mas que una especie. N° 67. GLOBULINA CARIBAEA. — (d'Orb. LAM. п, FIG. 7 y 8. Стовоимл. Testa ovata, alba, translucida, antice levigata, postice ru- gosa, obtusa; loculis globulosis trinis oblongatis , obliquis suturis, excavalis; apertura rotunda. Dimensiones. Longitud Ѓоѓаї.............. LY pato 14 de millim. Concha oval, globulosa, translucida, mui lisa por arriba, mui rugosa por abajo, vitrea, mui ob- tusa por detras, un poco obtusa por delante, poco comprimida en los lados. Celdillas oblongas, convexas, de ningun modo comprimidas, oblongas en su juntura, separadas por suturas profundas ; la última mui grande, un poco obtusa. 4bertura redonda y bastante grande sin radios al rededor. Color blanco. Esta especie por sus celdillas no comprimidas difiere esencialmente de todas las demas es- pecies oblongas ú ovales que conocemos; la que se le asemeja mas еп la totalidad, la GLopuLIxa depressa, tiene las celdillas comprimidas y se distingue por este caracter. Hemos encontrado esta concha en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra, y tambien en la de la Martinica, que nos ha dado M. de Candé. 2 SECCION. Alternativa de las celdillas en dos caras. GÉNERO POLYMORPHINA. — (4'0Orb.) Concha libre, inequilátera, vitrea, oblonga ó prolongada, comprimida. Celdillas por lo regular numerosas, poco envolvientes, alternando en dos líneas; pero siempre cubriéndose mucho mas de un lado que de otro, lo que hace а la concha irregular é inequilátera. 4bertura redonda al extremo de la última celdilla. (Mopires, n° 23, 1'° livraison, упо 29, 2° livraison.) Relaciones y diferencias. Con la misma contextura vitrea, celdillas semejantes y una abertura FORAMINIFERAS. 131 colocada bajo las mismas condiciones que el género Guttulina, de las celdillas que se verifica en dos caras opuestas en lugar d húmero mucho mayor de celdillas aparentes y establece un difiere, no obstante, por el conjunto siempre inequil. contextura vitrea de la concha. Conocemos diez y ocho especies de este género, en el Adriático y en l éste se distingue por la alternativa е ser en tres, lo que produce un paso con las Textularideas, de las que átero y no regular, lo mismo que por la de las cuales hai siete vivas en el Mediterraneo, as Antillas. De las especies fosiles encontramos que el número mas escaso es el de Italia y de los terrenos semejantes subapeninos del Austria, puesto que no tenemos mas que cuatro de estas capas; el mismo número de especies poco mas ó menos se encuentra en el depó- sito terciario de la Gironda y del Adour, algunas en los faluns de la Turena y en el crag de Ingla- terra ; pero son mas comunes que en ninguna parte en el depósito parisiense. Las encontramos aun en la formacion cretacea desde las capas mas superiores hasta la arcilla verde. La isla de Cuba no nos ha ofrecido mas que tres especies propias de esta isla y de las Antillas en general. N° 68. POLYMORPHINA ROCHEFORTIANA. — (POrb.) LAM. п, FIG. 9, 11. РогумокрнічА. Testa ovalo-oblonga, compressiuscula, leevigata, translucida, vitrea , alba, antice posticeque obtusa; loculis angustatis; transversis , obli- quis; apertura rotunda. Dimensiones. Longitad total... ‘h millim. Concha oval, un poco oblonga, translucida, vitrea, mui lisa, mui obtusa en sus extremidades, mui poco comprimida, casi cilíndrica. Celdillas estrechas, mui oblicuas; la última ocupando la mitad de la longitud de la concha, todas poco distintas, sin suturas profundas. Abertura redonda, sin radios al rededor. Color blanco. Esta especie es de todas las que conocemos la que mas se aproxima á nuestra PoLYMORPHINA truncata, fosil de la Coroncina en Italia, por su forma casi cilíndrica ; pero se distingue por sus celdillas mas oblicuas (la última mucho mayor á proporcion), lo mismo que por la falta de radios al rededor de la boca. Hemos descubierto esta especie en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Martinica, cuya posesion debemos á M. Fernando de Candé : es rara en estas dos islas. N° 69. POLYMORPHINA IRREGULARIS. — (dOrb.) LAM. п, FIG. 12 y 13. PoLyMorPHINa. Testa oblonga, compressa , longitudinaliter sulcata, trans- lucida, alba, postice obtusa, antice subacuminata; loculis incequalibus, irregularibus, inflatis, ѕшигіѕ excavatis; apertura rotunda. Dimensiones. Longitud tolal.............. PURO з nis pavake a + millim. Concha oblonga, un poco comprimida, translucida, vitrea, marcada en su longitud de lados 132 FORAMINIFERAS. regularmente espaciados y mui salientes; su extremidad inferior es mui obtusa, la parte superior i Celdillas desiguales, irregulares, unas grandes, otras pequeñas, todas mui infladas y separadas por suturas profundas; la última celdilla mui pequeňa. Æbertura redonda en la ex- tremidad de la prolongacion anterior de la concha. Color blanco. Al paso que se distingue de las demas por su forma irregular, esta especie difiere todavía mas - claramente рог los lados de que está adornada, caracter que la es particular. Hemos encontrado esta conchita en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra, lo mismo que en las de la Jamaica y Martinica, recojidas por M. Fernando de Candé, lo que nos induce á creer que sea propia de todas las Antillas. № 70. POLYMORPHINA RUGOSA. — (dOrb.) LAM. п, FIG. 14 y 15. PoLymorrmina. Testa oblonga, compressa , rugoso-aspera, alba, antice pos- ticegue acuminata; loculis incequalibus inflatis, ultimo, magno apertura rotunda. Dimensiones. /олеийа4(оаЇ.............. S pantog ad « 1з millim. Concha oblonga, un poco comprimida, cubierta por todas partes de rugosidades irregulares ; las dos extremidades acuminadas. Celdillas mui desiguales, irregulares; las primeras chicas, la úl- tima mui grande, ocupando mas de las dos terceras partes de la longitud de la concha, está un poco acuminada por delante , todas son infladas y separadas por suturas profundas. Æbertura re- donda terminal, sin radios al rededor. Esta especie se distingue por sus rugosidades de todas las demas; su irregularidad de forma es tambien poco comun en el género. E б La hemos encontrado en las arenas de Cuba у la Martinica, traidas por los Sres. de la Sagra y de Candé : es mui rara. GÉNERO VIRGULINA. — (dOrb.) Ў Concha libre, inequilátera, vitrea, prolongada, comprimida. Celdillas numerosas, poco envol- vientes, alternando en dos líneas casi regulares, cubriéndose mas de un lado que de otro. 4ber- tura virgular y corrida á la parte superior de la última celdilla. (Морётк, по 65, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género representa las Polymorphinas por la alternativa casi re- gular de las celdillas, distinguiéndose al mismo tiempo por su abertura en forma de virgula, en lugar de ser redonda terminal y varias veces radiada ; ademas esta abertura baja desde la extre- midad hasta la celdilla precedente y se parece mucho á Іа de algunas especies de Burmuxa. No conocemos mas que dos especies, una fosil de las cercanías de Sienna en Italia y de Viena en Austria, la otra viva de Cuba. FORAMINIFERAS. 133 № 71. VIRGULINA PUNCTATA: — (dOrb.) LAM. 1, FIG. 35 y 36. VircGuLIÑNA. Testa elongata, compressiuscula, punctata, albo-fi ете; postice subacuminata; loculis numerosis, obliquis; apertura minima. Dimensiones. Longitud tolal............. 2 ритбоз............. 'һ de millim, Concha mui prolongada, derecha, casi igual por cada lado, delgada, frágil, lijeramente marcada de puntitos en toda su superficie, un poco acuminada aunque obtusa en su parte inferior, truncada por delante. Celdillas estrechas, espaciadas unas sobre otras, oblicuas, colocadas medio cubrién- dose de lado y mui regulares, convexas, separadas por suturas profundas ; la última mas redon- deada por detras que las otras. 4bertura terminal en virgula estrecha no bajando hasta la celdilla precedente. Color blanco, un poco amarillento principalmente hácia la parte superior. Habiamos creido á lo primero que esta especie era la misma que nuestra VIRGULINA squamosa, pero comparándola, á pesar de formas mui análogas, hemos reconocido que se diferenciaban es- pecíficamente : la última es lisa, mientras que la otra es punteada; la abertura de la V. punctata es mas larga y se extiende por tanto hasta la antepenúltima celdilla. La hemos encontrado en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Ja- maica, recojidas por M. Fernando de Candé; siempre es mui rara y lo es todavía mas por su extremada delicadeza. 2* FAMILIA. TEXTULARIDAE. — (4Orb.) Concha libre, regular, equilálera, compuesta de celdillas alternando en todo ó en рате , pero en dos ejes opuestos , en un mismo plano cuyas caras son semejantes. Conlexlura porosa, rugosa ó tambien como acribillada de aguje- ritos, y muchas veces aglutinante. 1° SECCION. Celdillas alternas en la juventud, proyectadas en línea recta еп la edad adulta. GÉNERO BIGENERINA. — (d'Orb.) Concha libre, regular, equilátera, mui rugosa. Celdillas alternando de un modo regular en dos ejes en la juventud ; despues sobre éstas en la adad adulta vienen á apilarse en un solo eje lon- 26 134 FORAMINIFERAS. gitudinal celdillas únicas cuya extremidad superior está taladrada de una abertura central. (Mo- DELES, по 87, 3° livraison.) Relaciones y diferencias. Este género ofrece en la juventud de la concha una verdadera Textu- laria en la que, cambiándose de improviso el modo de crecer, las celdillas están apiladas en una sola línea; así conforme se ve, este género presenta á la vez la conformacion de las Textularias y la de las Nodosarias, estableciendo un paso entre las Stich g las Enalostegas por la reunion de caracteres de los dos órdenes. Este género difiere del siguiente por la abertura, que aquí es central, mientras que en la otra es marginal. No conocemos mas que tres especies de esta division, todas tres del mar Adriático. Antes de nosotros este género era desconocido. GENERO. GEMMULINA. — (tOrb.) Concha libre, regular, equilátera, digitada. Celdillas á lo primero alternando regularmente en dos ejes, despues cambiando el modo de crecer y formando sobre el primero un apilamiento sobre un solo eje longitudinal. 4bertura superior marginal. ( Морёгкз, по 88, 3e livraison.) Relaciones y diferencias. Las Gemmulinas tienen con las Stichostegas las mismas relaciones que las Bigenerinas, sin mas diferencia casi que por su abertura lateral 3 se aproximan en el estado perfecto mas á las Максіхиима que 4 los otros géneros. Se distinguen del género precedente por la abertura lateral en lugar de ser central. La única especie que conocemos, la GEMMULINA digitata, habita en el Mediterraneo. 2: SECCION. Celdillas regularmente alternas en todas edades. TEXTULARIA. — (Defrance.) Concha libre, regular, equilátera, rugosa ó glutinosa, cónica, oblonga ó cunciforme. Celdillas globulosas ó en cuña, alternando regularmente en todas las edades, de cada lado del eje longitudi- nal, cubriéndose en parte ó solamente sobrepuestas en dos líneas alternas regulares. Abertura semi- lunar, transversal, lateral, en el lado interno de cada celdilla. (Мордтвѕ, по 28, 2e livraison ; n° 7, 4e livraison.) a Relaciones y diferencias. Este género se distingue fácil de las B porque en toda edad conserva la misma forma en su crecimiento. Difiere de las Sacriva y de las Vurvurma por la disposicion de su abertura que en lugar de ser superior es lateral en el lado interno de las celdillas. Muchas conchas de este género están cubiertas de cuerpos estraños, de partes de arena agluti- nadas en el animal durante su crecimiento, caracteres que solo encontramos en las Foraminiferas entre las Entomostegas. Es difícil explicarse la extrema torsion del animal cada vez que pasa á una nueva celdilla formándola, y la torsion mayor de todas sus partes en el conjunto de la concha. FORAMINIFERAS. 135 Antes de nuestra primera publicacion sobre las Foraminiferas ! en 1825, no se conocia mas que una especie de este género que M. Defrance habia creado para ella, sin embargo de no haber reconocido su abertura. Lamarck no ha citado este género aunque Soldani figuró un buen número de especies соп el nombre de Рогумокрніом, que aplicaba al mismo tiempo á una porcion de gé- neros diferentes. Nosotros hemos estudiado y dibujado poco mas б menos unas cuarenta especies de este género, vivas y fosiles. Las especies vivas por casi una mitad son del mar Adriático; las otras son bas- tante numerosas en las Antillas, mui raras en la costa oriental y occidental de Africa, en las Canarias, en las islas Oceanias, en la India, en el mar Rojo, sin que conozcamos alguna de toda la extremidad meridional de la América. Las especies fosiles son mui numerosas en las capas terciarias subapeninas de la Italia, de la Provence y del Austria (entre las cuales muchas especies tienen su análoga viva en el Adriático), enel crag de Inglaterra; en el depósito de Burdeos conocemos tres, una de ellas mui comun y característica (TexruLarra acuta); pero ninguna especie se nos ha mostrado aun en el depósito parisiense. No obstante, se encuentran Textularias en todas las capas cretaceas, desde las mas superiores hasta en el gres verde y aun en los terrenos neocomienses. La isla de Cuba nos ha ofrecido seis especies de Textularias comunes á las otras Antillas. N° 72, TEXTULARIA CONICA. — (d'Orb.) LAM. I, FIG. 19 y 20. TExTULARIA. Testa brevi, conica, trochoidea, rugoso-aspera, compressa , lateraliter subcarinata ‚ flavescente , postice obtusa, antice dilatata , truncata; loculis angustatis; apertura lineari. Dimensiones. Гопейа@.............. 3 puntos... + 2/2 millim. Concha rugosa, mui corta, cónica, tan ancha como alta, derecha, lijeramente comprimida, un poco aquillada en los lados, obtusa en su extremidad, mui ensanchada y como truncada por enci- ma. Celdillas estrechas, no salientes, reuniéndose en cuña; las dos superiores carenadas en su borde superior y como infladas en el medio. 4bertura en hendidura transversal, en el lado in- terno de la última celdilla en su punto de contacto con la precedente. Color amarillento. Esta especie por su forma trochoide tan ancha como larga se acerca á muestra TExTULARIA tro- choides , pero se distingue por su compresion general y por su carena lateral. Es rara en Cuba y en la Jamaica. La hemos descubierto en las arenas de estas islas, traidas por el Sr. de la Sagra y M. Fernando de Candé. № 73. TEXTULARIA CANDEANA, — (4'0rb.) LAM: I, FIG. 25, 27. TEXTULARIA. Testa elongato-conica, rugosa, flavescente, lateraliter convexa, * Annales des Sciences naturelles, 136 FORAMINIFERAs. postice acuminata, antice globoso-convexa; loculis angustatis, ultimis mag- nis convexis; apertura lineari. Dimensiones. Longitud. + 1 millim. Concha prolongada, mas larga que ancha, derecha, mui convexa, no aquillada, mui aguda en su extremidad, ahuecada en los lados, mui ensanchada y convexa en la parte superior. Las celdillas superiores son rugosas, y las inferiores lo son hasta punto de parecer como herizadas. Celdillas estrechas, apenas salientes, reuniéndose por cubrimiento anguloso, no en cuña ; las dos superiores mui grandes, convexas, globulosas. Æbertura semilunar, mui estrecha. Color amarillento. Ninguna otra especie de Textularia nos muestra esta forma puntiaguda y ahuecada en los lados con la grande anchura superior de la TexruLarta Candeana; así se distingue claramente de todas las demas por estos caracteres. Rara en la arena de Cuba, no lo es menos en la Martinica y en Santo Tomas, donde tambien se encuentra. Los individuos de Cuba son mayores que los de las otras islas. № 74. TEXTULARIA AGGLUTINANS. — (d'Orb.) LAM. 1, FIG. 17, 18, 32, 33 y 34. TExTULARIA. Testa elongato-conica, rugoso-agglutinante , alba, lateraliter convexiuscula ; postice cuneata; loculis largis, ultimis convexis; apertura semi-lunari. Dimensiones. Longilad............o.. 6 puntos.. © L millim. Concha prolongada, su longitud es de mas del doble de su anchura, derecha, un poco inflada en su longitud, no aquillada, mui convexa, puntiaguda posteriormente, poco ensanchada por delante, convexa en esta parte, cubierta el todo de asperezas que á favor de un grande aumento parecen en parte compuestas de granos de arena aglutinados y adherentes á la concha, como se ve en el Tro- cuus agglutinans. Celdillas anchas, convexas, transversales sin ser oblicuas, reuniéndose en la línea mediana lateral de un modo regular, pero obtuso, se cubren apenas y están mas bien aplica- das unas sobre otras; las dos últimas por esta razon son mui poco mas anchas que las otras; éstas son convexas por encima. 4bertura semilunar, estrecha sobre la vuelta de la celdilla. Color blanco. Por la reunion transversal recta de las celdillas, la prolongacion de la concha y su convexidad lateral, esta especie difiere de todas las demas; es mucho mas prolongada que la precedente, mucho menos inflada y mas cónica que nuestra TEXTULARIA lævigata. Es bastante comun en Cuba, Santo Tomas, la Martinica, rara en la Jamaica ; parece que ha- bita en las Antillas. FORAMINIFERAS. 137 No 75. TEXTULARIA CARIBAEA. — (007%) LAM. 1, FIG. 28 y 29. TEXTULARIA. Testa elongato-compressa, punctata; alba, lateraliter subca- rinata , postice obtusa; loculis obliquis; apertura semi-lunari. Dimensiones. Longitad г0ѓаї............... 2 юийоз............... їз de millim. Concha prolongada, tres veces mas larga que ancha, recta, un poco cónica, comprimida por el lado de la reunion de las celdillas, lijeramente aquillada por los lados en el sentido de la anchura, bastante obtusa en su extremidad, desde donde se ensancha gradualmente hasta las partes supe- riores convexas ; su superficie está un poco carcomida por depresiones igualmente espaciadas y mui fijas. Celdillas mui poco anchas, planas, mui oblicuas, con suturas estrechas, formando án- gulos regulares; se cubren poco, así es que las dos últimas, bastante convexas, son mui poco mas anchas que las otras. 4bertura estrecha linear. Esta especie, mucho mas prolongada y comprimida que las precedentes, se aproxima mucho á nuestra TexruLaria Menardii, pero se distingue por una forma mucho menos comprimida y mas cónica en su totalidad ; las celdillas son tambien mas oblicuas. Hemos encontrado esta concha en las arenas de Cuba, en las de la Jamaica y en las de la Martinica, lo que nos induce á creer que es de todas las Antillas. N° 76. TEXTULARIA SAULCYANA. — (d'0rb.) LAM. І, FIG. 21 y 22, TexTUuLARIA. Testa oblongo-compressa, punctata , alba, carinata, postice obtusissima; loculis arcuatis , complanatis; apertura subrotunda. Dimensiones. Longitud tolal............ Lepanto А. ATA: "А de millim. Concha oblonga, recta, sumamente comprimida, aquillada en los lados, mui obtusa y redondeada por detras; casi igual en su longitud ; su superficie está sumamente arrugada. Celdillas estrechas, arqueadas, mui poco oblicuas, planas, con suturas poco profundas, formando un ángulo doble sobre la línea intermedia de reunion, cubriéndose apenas; así las últimas son casi tan anchas como las otras, siendo al mismo tiempo convexas por encima. 4bertura redondeada, plana, sobre el lado interno de la últimas celdillas. Color blanco. Mucho mas comprimida y mas obtusa que las especies precedentes, la TexruLaria Saulcyana no tiene relaciones reales mas que con nuestra T. planata ; no obstante, difiere por una forma mas prolongada y por sus lados mas angulares y menos comprimidos: por lo demas tiene las mismas suturas y el mismo aspecto exterior. Esta pequeña conchita es rara en Cuba y en la Jamaica, donde se halla simultaneamente. 27 138 FORAMINIFERAS. № 77. TEXTULARIA CUNEIFORMIS. — (4 Orb.) E LAM. 1, FIG. 37, 39, TextuLarIa cuneiformís, d'Orb., 1825, Tab. méth. des Céphal., Ann. des Sc. nai., 1826, р. 97, n° 18. TExTULARIA. Testa conico-compressa, alba, carinata, postice acuminata; loculis angustatis arcuatis; apertura lineari. Dimensiones. Longitad ѓоваї.............. б puntos... o. 1 milim. Concha oblonga, recta, mui comprimida, sumamente aquillada y cortante por los lados, puntia- guda ó cuneiforme por detras, creciendo regularmente hasta las partes superiores truncadas, su superficie lijeramente rugosa. Celdillas mui estrechas, transversales y arqueadas, planas ; sin em- bargo, avanzan en su extremidad un poco las unas sobre las otras; están simplemente sobre- puestas sin rebasar y las suturas poco marcadas, sobre todo en las partes inferiores; su articulacion media es la continuacion de las suturas lateras sin ángulo distinto; las últimas celdillas aquilladas en su contorno están planas por encima. Abertura en hendidura sobre la vuelta de la celdilla. Ninguna de las especies que preceden puede compararse á ésta; mucho mas comprimida, mas angulosa que ninguna de ellas, la encontramos íntimas relaciones con la TexruLarta lingula, Nob,, pero es mas cónica, menos deprimida, y difiere evidentemente como especie. Por otra parte, la Texruarta lingula es propia de los terrenos cretaceos de Chavagne (Maine-et-Loire), lo que hace la aproximacion mas dificil todavía. GÉNERO VULVULINA. — (d'Orb.) Concha libre, regular, equilátera, poco rugosa, oval, comprimida. Celdillas comprimidas, alter- nando regularmente en todas edades por cada lado del eje longitudinal, cubriéndose en parte y formando dos líneas alternas regulares. Abertura única, superior á la última celdilla y en hendidura longitudinal paralela á la compresion lateral. (Monkxes, по 59, 3e livraison.) Relaciones y diferencias. Este género, vecino de las Textularias por la singular alternativa de las celdillas en toda edad, se distingue por formas acortadas, una gran compresion lateral y sobre todo en que su abertura en vez de ser semilunar y colocada transversalmente en el lado interno de cada celdilla en su punto de contacto con la precedente; esta abertura es superior á la parte media de la última celdilla y en hendidura longitudinal. Aunque lijeramente punteadas estas conchas nunca tienen las rugosidades que caracterizan á las Textularias. Soldani fué el primero que ha figurado algunas especies con el nombre de Ortocerarun pupa; Lamarck no cita ninguna, y la única que hallamos indicada por los autores modernos está colo- cada por M. Defrance entre las Textularias. Conocemos cuatro especies vivas de este género, de las cuales tres son del Adriático y una de Cuba. FORAMINIFERAS. 139 Ке 78. VULVULINA GRAMEN. — (2 0г.) LAM. т, FIG. 30 у 31. VULVULINA. Testa oblongo-compressa, levigata, alba, lateraliter carinata, postice oblusa, antice convexa; loculis obliquis, acuminatis, serratis; aper- tura lineari. Dimensiones. Diámetro......... ..... 2 puntos .. 1А de millim. Concha oblonga, recta, mui comprimida, lisa, aquillada y con dientes de sierra por los lados, obtusa inferiormente, convexa por encima. Celdillas mui oblicuas, oblongas, regularmente alter- паз; cada una está aquillada inferiormente y forma salida sobre la que precede y prolongada la- teralmente en punta, de modo que su totalidad figura una de esas langostas de ciertas gramineas ; se cubren en una pequeña parte y vienen á unirse regularmente en el centro de cada lado. La última celdilla es convexa y en esta convexidad tiene una hendidura longitudinal un poco ensan- chada hácia el medio de su longitud. Color blanco. Esta sorprendente especie, la mas linda del género, se distingue claramente de las otras por su forma oblonga, en espiga, por la prolongacion lateral en punta de sus celdillas, lo mismo que por la salidita inferior del borde de ésta. En la Vurvunixa capreolus (Monètes, n° 59) la salida de las celdillas es por el contrario en la parte superior. Hemos descubierto esta pequeñísima conchita en las arenas traidas de Cuba por el Sr. de la Sagra, y de la Jamaica, por M. de Candé; sobre todo, es mas comun en esta última isla. GÉNERO SAGRINA. — (4Orb.) Concha libre, regular, equilátera, cónica. Celdillas globulosas, alternando regularmente еп todas edades por cada lado del eje longitudinal y cubriéndose en parte. Abertura redonda, supe- rior а la última celdilla y colocada en la extremidad de una prolongacion. (Морі, по 109, 5° li- vraison.) Relaciones y diferencias. Este género, compuesto de celdillas regulares como las de los dos géneros precedentes, se distingue en que en lugar de tener la abertura de cada lado por el lado interno y en hendidura transversal, como lo vemos en las Texrutarza, б en hendidura longitudinal, como en las VuLvuLiNa, esta abertura es redonda y colocada sobre una prolongacion superior de la última celdilla. No conocemos todavía mas que dos especies, una viva que hemos descubierto en las arenas de las Antillas, traidas por el Sr. de la Sagra, la que hemos creido que debiamos dedicar á este sabio como un testimonio de nuestra alta estimacion y de nuestra amistad ; la otra fosil es de la creta blanca del depósito de Paris. 140 FORAMINIFERAS. № 79. SAGRINA PULCHELLA. — (4'Orb.) LAM. I, FIG. 23 y 24. SAGRINA. Testa oblongo-conica, compressa, alba, apice obtusa, longitudi- naliter costata , costis elevatis; loculis globulosis; apertura rotunda. Dimensiones. Longitud tolal....oo.ooooo.. 3 ритіоз........ eo... a millim. Concha oblonga, cónica, comprimida lateralmente en su totalidad, recta, obtusa inferiormente, mui ensanchada por lo alto y terminada por celdillas mui convexas ; su superficie está adornada de anchos lados longitudinales elevados, mas salientes hácia el tercio inferior de cada celdilla y formando una salida marcada. Celdillas cuatro á cinco por cada lado, todas globulosas, redondea- das, convexas por encima, con las suturas laterales oblicuas y las medias formando ángulo separado de las primeras. Abertura en el medio de la convexidad de la última celdilla y en la extremidad de una salida marcada. Color blanco. Esta linda concha, única en su género, es bastante comun en las arenas de Cuba, en las de Santo Tomas y de la Jamaica; sin embargo, á causa de su gran delgadez es difícil de encontrar. GÉNERO CUNEOLINA. — (d'Orb.) Concha libre, regular, equilátera, rugosa б estriada, mui comprimida, cónica ó flabeliforme. Celdillas comprimidas, estrechas, alternando regularmente en toda edad, formando cada una como dos series de banderolas aplastadas, aplicadas una contra otra y encabestradas solo en su extre- midad. Aberturas numerosas, en una línea, en toda la longitud del lado externo de la última cel- dilla. (Monñres, по 110, 5° livraison.) Relaciones y diferencias. Por la forma exterior estas conchas difieren de todas las demas : re- presentan un cono mui comprimido, compuesto de celdillas comprimidas y pegadas, por decirlo así,en dos ejes separados ; asi las Textularias están comprimidas en el sentido del encabestra- miento, de modo que las celdillas se hallen por cada lado del aplastamiento; en las Cuneolinas la compresion se verifica en el sentido inverso ; así las celdillas son las que están aplastadas y las su- turas de la alternativa están por los lados y no en el medio. Se distinguen ademas por tener un gran número de aberturas en la última celdilla. Hemos descubierto este género en el gres verde y las capas cretaceas que alternan en él en la embocadura de la Charente; conocemos tres especies : la Cuxeorma pavonia, CUNEOLINA сопіса y CunzoLixa Fleuriausiana. ORDEN 6°. AGATHISTEGAS (). — (20%) Caracteres. Celdillas apelotonadas en dos, en tres, en cuatro ó en cinco caras sobre un eje comun, formando cada una en su enroscamiento la longitud total de la concha б la mitad de la circunferencia; por este medio la abertura, casi siempre prevista de un apéndice, se encuentra alternativamente en una extremidad б en la otra. El modo con que se forman y crecen las conchas de este órden es del todo particular: ya no son celdillas apiladas sobre una sola línea recta como las Stichostegas, ó espirales como las He- licostegas, ó alternas como las Enalostegas. El crecimiento de las Agathistegas es como lo indica su nombre, un verdadero apelotonamiento de celdillas al rededor de un eje lateral á la longitud, de modo que las celdillas enroscadas así en dos, en tres, en cuatro ó en cinco caras, vienen á for- mar las mas de las veces la mitad del enroscamiento y presentan desde luego alternativamente la abertura en la una y en la otra extremidad del eje longitudinal. Ademas del apelotonamiento de celdillas que distingue á las Agathistegas de los otros órdenes, su contextura es tambien del todo diferente, y su identidad absoluta en todas las especies de los géneros que colocamos es un motivo mas para reunirlas en un mismo grupo. Esta contextura es opaca, compacta, generalmente blanca, como lactea y sin algun indicio de porosidad, pareciéndose todas las conchas á la porcelana ó al marfil; así hai mucha distancia hasta la testa porosa de casi todas las Helicostegas. Otro caracter constante en todos los géneros de Agathistegas separa todavía este órden de los demas y demuestra su agrupamiento natural, y es la forma de su abertura casi siempre idéntica en todos los géneros; en efecto, por lo regular es redonda, oval ó semilunar, orillada de pequeños cerquillos y siempre provista de un diente sencillo ó compuesto que se encuentra en todas las especies. Este órden no comprende mas que conchas libres. Siguiendo la marcha comparativa con los otros órdenes creemos que se deba dividir en dos secciones primordiales: la primera compuesta de conchas enroscadas sobre un mismo plano por cada lado del eje, y por lo mismo de partes pa- res, formará nuestra familia de las Miliolideas; la segunda compuesta de conchas enroscadas en yn, peloton, y de а 142 FORAMINIFERASs. tres, cuatro б cinco caras por cada lado del eje sin que puedan tener ninguna parte par, será nuestra familia de las Multiloculideas. Las secciones genéricas se fundarán tambien en el modo de crecer, y podrian comparativamente á los órdenes servir de base á familias distintas. Entre las Miliolideas, cuando una celdilla forma toda la revolucion al rededor del eje y no hai mas que una celdilla aparente, son ппез- tras UyiocuLrxa. Cuando el apelotonamiento se verifica en dos caras opuestas que se com- pongan de celdillas envolvientes, que no haya mas que dos celdillas aparentes en toda edad las dos vacías y solo una abertura, son nuestras BriocuLixa; cuando la celdilla está llena y hai muchas aberturas, son las FazuLarta. Cuando con el apelotonamiento en dos caras, las celdillas по envuelven y todas son aparentes, son nuestras SPIROLOCULINA. Entre las Multiloculid cuando el apel i se verifica en tres caras opuestas en todas edades con abertura redonda, son nuestras TniLocuLIa ; con abertura en cruz, son nuestras Cru- CILOCULINA ; cuando este mismo apelotonamiento se verifica en tres caras en la juventud y las cel- dillas se proyectan despues en línea recta, son nuestras ArTicuLixa. Cuando el apelotonamiento se verifica en cuatro caras opuestas, son nuestras SPHEROIDINA; cuando se verifica en cinco caras en toda edad, son nuestras QuivgueLocuLia; cuando la concha enroscada á lo primero, solo en lo edad adulta forma peloton en cinco caras, son nuestras ÁDELOSINA. Para que se puedan comprender mas fácil estas modificaci las reproduciremos com- parativamente en el siguiente cuadro. AGATHISTEGAS. Í% FAMILIA. MILIOLIDE, Concha equilátera, de partes pares. PRIMERA SECCION. Celdillas formando enrosca- Una celdilla aparente... see +. UNILOCULINA: miento completo. o cio / Celdillas envolvientes, Interior vacio; una abertura. + + BILOCULINA. А е dos араг s i p a COS А. Ca нае з aparentes, Interior lleno; muchas aberturas FABULARIA Celdillas no envolvientes; todas арагемез................. SPIROLOCULINA + caras opuestas. 2 FAMILIA. MULTILOCULIDE. Concha inequilátera, sin partes pares. рм En todas edades; tres Abertura redonda ú oval........... TRILOCULINA. Apelotonamiento en tres celdillas aparentes. Abertura en CruZ........ . CRUCILOCULINA. caras opuestas. \ Celdillas proyectadas en linea recta en la edad adulta + ARTICULINA. BEGUNDA SECCION. Apelotonamiento en cuatro Cuatro celdillas aparentes ...... МЭ E E TA SPHÆROIDINA. caras opuestas. TEMOERA SECOION. A Е PE En todas edades ; cinco celdillas aparentes.......... tresse.. QUINQUELOCULINA.+ Apelotonamiento en cinco А Solamente en la edad mui айоЦа.,..................... + + ÁDELOSINA. caras opuestas. Creemos difícil hallar géneros mas distintos unos de otros que los de este órden. Presentan for- FORAMINIFERAS. 143 mas tan marcadas que no existe realmente algun paso entre ellos; así el estudio de algunas horas bastará siempre para aprender á distinguirlos. El modo de crecer de las Agathistegas, tan diferente de los demas por su apelotonamiento, nos ofrece, sin embargo, algunos pasos distantes con los de los otros órdenes. 1° Las Arrrounixa despues de haberse apelotonado en tres caras tienen sus celdillas proyectadas en línea recta como las de las Stichostegas, y ofrecen por lo mismo un paso con este órden. 2° El apelotonamiento en el mismo plano de las Ви.осоима, de las Farurarta y de las SprroLo- CULINA forma una espira envolviente ó no, mas ó menos regular, y muestra desde luego analogía con la espira regular de las Nautiloideas entre las Heli g p 3° En el apelotonamiento en dos caras opuestas por cada lado del eje longitudinal, de las BrLo- cuLIxa, de las Fanurarta у de las SPMOLOCULINA, ¿ho se podria ver una especie de alternativa regular y por lo mismo establecer cierta analogía distante entre las Agathistegas y Enalostegas ? Creemos por tanto, como en los órdenes precedentes, poder representar por un paso radiante la analogía mas б menos lejana que existe entre las Agathistegas y las demas Foraminiferas. Paso å las STICHOSTEGAS por las ARTICULINA. 10d Раа) Р а ЖМ? Разо а las HELICOSTEGAS por las BILOCULINA, FABULARIA у SPIROLO “VNIT0OOTOMIAS Á VIMVINIV 4 VNIIADOTIY se SV9ALSOTVNH St] Y osed Conocemos los animales de los géneros TrILOCULINA y (QUINQUELOCULINA. А pesar del modo de en- roscamiento distinto de estos dos géneros, no se diferencian en modo alguno, y la analogía сош- pleta de contextura de la concha, la forma idéntica de su abertura, nos inducen á creer que en todos los géneros de este órden los animales deben parecerse. Lo mismo que en los otros órdenes en que hemos podido observar la forma de estos seres singulares, consisten en una materia colo- reada glutinosa, contenida en las cavidades de las celdillas, y en un hacecillo de filamentos incoloros mas ó menos extensibles, mas ó menos divididos y ramificados que salen por la aber- tura á voluntad del animal y sirven á la reptacion. En este órden los filamentos solo se mani- fiestan por la abertura y no por el mismo contorno de las celdillas, como lo vemos en las He- licostegas. Dirijamos ahora una rápida ojeada sobre la distribucion geográfica actual de los géneros de Agathistegas vivas. Las UyiLocuLiwa no se han manifestado todavía mas que en el mar de las Indias. Las BiLocuLIma están repartidas en América, en las Antillas, en Patagonia, sobre el Atlántico. Se encuentran en corto número en las Canarias, en la costa de Africa; pero sobre todo son abun- dantes en el Mediterraneo. Las SprroLocuLiNa, de las mas comunes en el Mediterraneo, lo son tam- 144 FORAMINIFERAS. bien en las Antillas y en la India, mientras que solo se encuentran vestigios en la Oceanía, en las costas de Africa y en las del Oceano en Francia. Las Тлп.осоима y las QuinpuELocULINa, repartidas indistintamente en todos los mares, son, sin embargo, mas numerosas en las Antillas, en el Medi- terraneo y en el Adriático. Se presentan en las costas del Oceano, en Europa, hasta en Norvega, en toda la costa de Africa, en la Oceanía, en las costas americanas del grande Oceano ; mui numerosas en la India, son mas raras en el mar Rojo. Las ArricuLrxa hasta ahora solo se han presentado vivas en Сира, Las Spmaromiva son del Adriático y de la isla de Francia. Las AneLosiva son del Adriático solamente. El único género de las FapuLarra no se encuentra mas que fosil. En cuanto á las especies fosiles de 4gathistegas son todas sin excepcion de los terrenos terciarios, sin que ninguna especie hasta la presente se halla encontrado fuera de la formacion terciaria. Las BiLocuLINA son comunes еп el depósito de Paris, en el de la Gironda, en el crag de Inglaterra ; mas comunes aun en los terrenos subapeninos de Italia, donde se encuentran muchas análogas de las especies vivas del Adriático. Las FanuLarra y las Articuniva son solamente del depósito terciario de Paris; las AbELostxa y las Spnæromrsa по se encuentran fosiles mas que en los terrenos ter- ciarios de Italia y de las cercanías de Viena en Austria. Las SprroLOCULINA SON mas comunes en las capas subapeninas de Italia que en otra parte alguna; no obstante, se encuentran tambien en el depósito bordelés, en el de Paris y en el crag de Inglaterra. En cuanto а las TrInocuLIxa y Quin- QUELOCULINA abundan en los terrenos terciarios de la Italia y de Viena, en los de Burdeos, de Dax, en el crag ; pero en ninguna parte son tan comunes como en el depósito de Paris ó cerca de Gen- tilly : forman casi por entero la masa de las calizas groseras con que se ha edificado una parte de la capital de Fracia. Solo el género UxILocuLINA no se ha encontrado fosil todavía. Si sin tener cuenta con las formas queremos abrazar el conjunto numérico de las especies de Agatbistegas que hemos observado, se hallará que conocemos ciento treinta y tres especies vivas, de las cuales treinta y nueve son de la isla de Cuba y de las Antillas, diez y ocho del Mediter- vaneo, diez y seis de la India, catorce del Adriático, once de las Canarias, seis de las costas del Oceano en el litoral de la Francia, seis de la isla de Santa Elena, ocho de Patagonia, cinco de Rawack en el mar del Sud, cuatro del mar Rojo, cuatro del Perú, despues una en cada uno de los sitios siguientes : isla de Francia, cabo de Buena Esperanza, Madagascar y las islas Sandwich. Las Agathistegas no se encuentran mas que en los terrenos terciarios, y de ningun modo en la formacion cretacea ni en las capas inferiores. Hemos estudiado cincuenta y seis especies, de las cuales veinte y cinco son del depósito terciario parisiense, ocho de Dax, ocho de los terrenos suba- peninos de Italia y de las cercanías de Viena (un gran número de las cuales se halla vivo en el Adriático y Mediterraneo), cinco son de las cercanías de Burdeos y seis del crag de Inglaterra. No conocemos Agathistega alguna de las capas cretaceas ni de las otras formaciones que les son inferiores. A lo que parece se han presentado en los primeros terrenos terciarios, y desde este ins- tante se han mostrado en número considerable tanto como especies que como individuos. La historia de las conchas de este órden, que vamos á bosquejar, se limita á algunas palabras, puesto que antes de nosotros no se conocia mas que un género conteniendo apenas algunas espe- cies solo indicadas. El primer autor que ha hablado es Plancus*; figuró dos especies con el nombre de CoxcuuLa minima, pero con tan poca exactitud que hoi dia apenas podemos referirlas con cer- tidumbre á nuestros géneros. Algunos años despues, Gualtieri?, que habia recibido de Plancus arena del Adriático, figuró una especie apenas reconocible con el nombre de TuguLus marinus ; mas tarde Ledermuller? dió todavía una figura con el nombre de Corne d’ Ammon. De estas figuras Linneo en 1767 * hizo una sola especie del género SerpuLa, con el nombre de SerpULA semilunum, que Martini? en 1769 continuó llamando TuruLus; despues muchos compiladores, tales como Schroeter ê, Schreiber”, ete., citaron aun estas mismas figuras, que Gmelin* dió con el nombre indicado por Linneo. + Aríminensis de conchis minus notis, t, ЇЇ, fig. 1, 6. € Conchylien cabinet, 1.1, р. 61, lám. 3, f. 22. 2 Index Testarum conchyliorum, 1742, t, X 6 Einleitung, elc., 1783. Amusemens microscopiques, t. IV, fig. S, 1164. 7 Berfach ete., 1193. Systema nature, edicion 13, 1789. + Systema nature, 19° edicion FORAMINIFERAS. 145 Desde 1780, mucho antes de Gmelin, Soldani 1, este infatigable observador, habia figurado mu- chas especies de este órden, que reprodujo? mas adelante en su obra general, sin que sus figuras fuesen copiadas ni citadas por los clasificadores y los pilad es. Este naturalista las llama Fru- MENTARIA у SpuERULA. Boys у Walker* presentan tambien algunas de las especies de las islas Sandwich con los nombres de SerpuLa, reproducidas por Montagu *, lo mismo que por otros mu- chos autores ingleses, con los nombres de Vermicunum y de MoxocuLus. Lamarck еп 1804°, lo mismo que еп 1829 °, no hizo caso ninguno de 105 trabajos que acaba- mos de citar, y sin hablar de ellos creó para las especies que habia recojido en los terrenos ter- ciarios de Paris un género que llamó MiLrora. Este género, en el que describió cuatro especies, fué conservado y citado por M. Defrance” y por М. de Blainville *. Así á las pocas especies casi no caracterizadas conocidas como Serpura por los metodistas, á las cuatro especies descritas por La- marck con el nombre de Милогал y á las figuras imperfectas de Soldani se limitaban aun los cono- cimientos adquiridos acerca de las conchas de este órden cuando en 1825 presentamos al Instituto nuestro trabajo, fruto de seis años de estudio y de investigaciones. Habiamos desde entonces for- Ј mado соп el nombre de Agathistegas una seccion separada de estas conchas, еп la que reuniamos seis géneros, que hoi dia reproducimos casi en el mismo órden ; no obstante, la separacion de las Foraminiferas como clase nos ha hecho erijir á nuestras familias en órdenes. Las únicas mudanzas que nuestras nuevas investigaciones nos han hecho introducir han sido el añadir los géneros Омі- LOQULINA y CRUCILOCULINA que nos eran desconocidos en 1825, y el de las FaruLarra que por equi- vocacion habiamos colocado entre las Entomostegas; por lo demas todo está en la misma disposicion de nuestro primer trabajo. Tenemos en Cuba treinta y nueve especies, así repartidas por géneros. ВОСОК Миломрж........., mi 6 SPIROLOCULINA ........ 3 AGATHISTEGAS. +++... o oe o TRILOCULINA ++... e 14 MULTILOCULIDR++...... | ÁRTICULINA .......... 1 33 QUINQUELOCULINA . 18 39 39 Comparado al de la página 142, este cuadro manifiesta que no faltan en la isla de Cuba mas que los géneros UNILOCULINA, FABULARIA, CRUCILOCULINA, SPHEROIDINA у ÁDELOSINA, que solo se encuen- tran fosiles ó al menos mui restrinjidos en su distribucion geográfica. 1° FAMILIA. MILIOLIDAE. — (0070.) Concha libre, regular, equilátera, compuesta de celdillas apelotonadas so- 1 Suggio orittografico ovvero osservazioni sopra le terre * Mémoire sur les fossiles des environs de Paris, Апп. du nautiliche, ete., Sienna, 1780. Mas. Фі. nat., t. V. 2 Testaceografia ac zoophytografia, Sienna, 1187. è Animaux sans vertèbres, t. VII, р. 619. 3 Testacea minuta rariora, nuperrime detecta in arena 1 Dictionnaire des sciences naturelles. littoris Sandwicensis, 1784, p. 1, 2? y3. * Malacologie. 4 Testacea britannica, 1803, p. 497, p. 175. 146 FORAMINIFERAS. bre un mismo plano, al rededor ó por cada lado del eje; todas las partes pares. 1* SECCION. Celdillas formando enroscamiento completo al rededor del eje; una sola aparente. GÉNERO 1°. UNILOCULINA. — (FOrb.) Concha libre, regular, equilátera, globulosa. 4pelotonamiento regular al rededor del eje. Celdillas envolvientes cubriéndose enteramente; una sola aparente dando una vuelta completa al rededor de la que la precede; cavidad sencilla. Abertura única y dentada. (Морѓікв, по 111, 5° livraison.) Relaciones y diferencias. El apelotonamiento al rededor del eje, mas sencillo aquí que en los géneros siguientes, se verifica en el mismo plano por celdillas de las cuales cada una forma la vuelta entera de la celdilla precedente y la envuelve del todo. mitad de la circunferencia en los géneros BiLocutixa, Fagu QUINQUELOCULINA, pero no forma aquí círculo com No conocemos hasta ahora en esta division sin de la India, la UniLocuLixa indica d'Orb. Cada celdilla no forma mas que la LARIA, SPIROLOCULINA, TRILOCULINA y pleto ; así nunca se ve mas que una aparente. gular mas que una sola especie viva de las costas 2: SECCION, Celdillas apelotonadas en dos caras opuestas; cuando son envolvientes dos celdillas tan solo aparentes. GÉNERO 2. BILOCULINA. — (dOrb.) Concha libre, regular, equilátera, globulosa ó comprimida. 4pelotonamiento en dos caras орпеѕ- tas. Celdillas envolvientes cubriéndose del todo ; por lo tanto nunca hai mas que dos aparentes; su cavidad es sencilla. 4bertura única, situada alternativamente en las dos extremidades del eje longitudinal, y provista de dientes en la extremidad de la antepenúltima celdilla. (Морёієѕ, по 31, 2e livraison; nos 90 y 91, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. Por su apelotonamiento en dos Caras, por su forma equilátera, esta division se halla en las mismas circunstancias que los géneros SriroLOCULINA у Fasurarta, distin- guiéndose del primero por sus celdillas envolvientes, dos de las cuales solo son aparentes en todas edades, mientras que todas están al descubierto en las SrrorocurNa. Las relaciones con el género Fapurarra son mas evidentes, puesto que el enroscamiento y el cubrimiento de las celdillas son los mismos; pero el interior de las celdillas en las BiLocuLiva forma una sola cavidad, mientras que en las Fabularias esta cavidad está dividida en una multitud de tubitos. La abertura, que es única en las primeras, es múltipla en las segundas. Estos caracteres diferenciales hacen difícil la confusion entre estos géneros. е FORAMINIFERAS. 147 Las Biloculinas, mui poco numerosas en especies, nos han ofrecido quince, de las cuales siete vivas, tres de Cuba y de las Antillas, una de las Canarias, una de Patagonia y las otras del Adriá- tico. De las ocho especies fosiles, dos son de los terrenos terciarios de las cercanías de Paris, dos del crag inglés de Suffolk y las otras del depósito de Burdeos ó de Dax. N° 80. BILOCULINA SUBSPHERICA. — (AOrb.) ТАМ УШ» ШО: 25; 27. Впосоимл. Testa globulosa , subsphærica , lævigata, lucida, lactea , antice contracta, postice rotundata, margine convexa; loculis globosis rotundatis; apertura ovali, unidentata; dente transversim elongato utringue digitato. Dimensiones. Diámetro... .......... КАО Ae LARES їз de millim. Concha globulosa, casi esférica, lisa, reluciente, casi tan ancha como larga; sin embargo, un poco estrechada hácia delante, redondeada por detras, varias veces mas alta que ancha, con el contorno mui abombado, y en ningun modo aquillada. Celdillas mui abombadas; la última con bordes sinuosos á ia de un inflami de la mitad de su longitud; convexas y sin indi- cios de quillas. 4bertura oval, transversal, bastante grande, provista de un diente saliente, es- trecha en su base, despues ensanchada en su extremidad, del todo transversal y digitada en sus extremidades laterales, en una parte prolongada, obtusa. A veces es mas abombada que en nuestra figura. Color blanco de leche. Por su forma abombada tiene relacion con la BiLocuLixa bulloides, á pesar de estarlo mas todavía; difiere tambien por la sinuosidad de los bordes de la última celdilla, por su abertura mayor, por su diente prolongado transversalmente en lugar de ser simple y sin espansion lateral, Hemos encontrado esta especie en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Jamaica, recojidas por M. Fernando de Candé. N° 81. BILOCULINA OBLONGA. — ( d'Orb.) LAM. УШ, FIG. 21 а 23. BiLocuLINA. Testa oblonga, convexa, lævigata, lucida, albida , margine ro- tundata; loculis convexis, antice acuminatis, truncatis ; postice dilatatis , rotundatis; apertura transversali angustata , unidentata ; dente transversali, simplici. Dimensiones, Болуйш4@.............. 2 puntos.........00... В de millim, Concha inflada, oblonga, lisa, reluciente, mucho mas larga que ancha, casi tan alta como ancha, con el contorno mui redondeado, sin indicios de quilla. Celdillas abombadas, mui adelg: y truncadas por delante, sumamente ensanchadas por detras ; la última con bordes rectos, con- vexos, y con suturas profundas. Abertura en media luna, transversal, mui estrecha, provista de 148 FORAMINIFERAS. ЫШ un diente mui ancho, transversal, sencillo, un poco sinuoso, sin espansion lateral y en extremo saliente por fuera de la boca. Color blanco lacteo uniforme. Esta especie por su forma oblonga y por mas anchura difiere de nuestra BiLOGCULINA elongata, y es intermedia bajo este aspecto con las especies anchas como la precedente; se distingue tambien de todas las otras por su diente ancho transversal, por su boca estrecha y en semicírculo y por su forma estrechada hácia adelante. La hemos descubierto en las arenas de la isla de Cuba y en las de la Jamaica, donde es mui rara. No 82, BILOCULINA СААГАТ .— (dOrb.) LAM. ҮШ, FIG. 24, y LAM. 1х, FIG. 1 y 2. BiLocuLina. Testa ovali, compressa, leevigata vel subrugosa, albida ; margine carinata acuta; loculis convexiusculis, antice truncalis, postice dilatatis; apertura magna, transversali, angusta, unidentada; dente lato transversali, lateraliter digitato. Dimensiones. Los individuos mayores tienen hasta 4 punlos........ h de millim. Concha comprimida, oval, mui poco rugosa, mas larga que ancha, mucho mas ancha que alta, соп el contorno bastante regular, sumamente aquillado y cortante. Celdillas poco convexas, ovales, poco mas ó menos iguales á sus extremidades; la última con el contorno aquillado, con suturas profundas y con un espacio plano mui marcado entre la quilla y la sutura. 4bertura mui grande en media luna transversal, provista de un diente saliente, mui ancho en su base, armado de flanco por cada lado de una digitacion transversal, corta y obtusa. Color blanco de leche uniforme. Esta especie se aproxima por su quilla á nuestras BiLocuLiya depressa y B. alata, distinguiéndose de la primera por su forma oval y no circular ; de la segunda, con la que tiene todavía mas rela- ciones, рог la falta de ensanchamiento marcado por detras y por sus bordes lisos y no recorta- dos: рог lo demas son especies mui vecinas. Hemos descubierto ésta en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, lo mismo que en las de la isla de Santo Tomas, que nos han sido comunicadas por M. Fernando de Candé. Es bastante rara. VERO 3°. FABULARIA. — (Defrance.) Concha libre, regular, equilátera, globulosa ó comprimida. Apelotonamiento en dos caras opues- tas. Celdillas envolvientes cubriéndose del todo; solo dos aparentes ; cavidad llena, distribuida en un gran número de tubos longitudinales en el sentido del enroscamiento. 4berturas numerosas, redondas, colocadas en la extremidad de la última celdilla ya de un lado ya de otro cambiando en cada celdilla. ( Mopères, по 100, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. Por el modo con que se verifica el apelotonamiento de las celdillas en dos caras opuestas, por estas mismas celdillas envolvientes, de las cuales solo dos son aparen- FORAMINIFERAS. 149 tes en todas edades, este género se parece en todo exteriormente á las Biloculinas. Se distin- gue en que la cavidad de cada celdilla en lugar de estar vacía está lena y dividida en un gran número de tubos capilares que vienen á concluir en la abertura : esta abertura en lugar de ser única, como en las Biloculinas, se compone de una multitud de agujeritos. Se separan fácilmente estos dos géneros por los caracteres que acabamos de establecer. M. Defrance es el primero que ha indicado este género por algunas palabras en el Dictionnaire des Sciences naturelles en el artículo Fasurarta. Despues en 1825 hemos dado á conocer sus carac- teres distintivos en nuestro cuadro de los Cephalopodes ; entonces le colocamos con todas las conchas de celdillas divididas entre nuestras Entomostegas; mas hoi dia nuevas observaciones nos le hacen clasificar entre las Agathistegas, donde lo creemos mucho mejor. No conocemos todavía mas que una sola especie fosil del depósito terciario de Paris, y una va- riedad de Valogne. GENERO 4°. SPIROLOCULINA. — (dOrb.) Concha libre, regular, equilátera, comprimida. 4pelotonamiento en dos caras opuestas. Celdillas no envolvientes, aplicadas unas sobre otras sin cubrirse y por lo mismo todas aparentes; su cavi- dad es sencilla. 4bertura única, situada alternativamente en las dos extremidades del eje longitu- dinal; es sencilla ó provista de dientes, casi siempre prolongada еп tubo. (MonéLes, по 92, 4e li- vraison.) Relaciones y diferencias. Este género enroscado en el mismo plano, en dos caras opuestas y tambien equilátero como las FaruLarta y las BicenerIva, se distingue en que las celdillas no se cu- bren y están todas al descubierto en lugar de ser envolvientes. Estas lindas conchas están com- primidas-en el sentido opuesto al apelotonamiento, mientras que la compresion de las demas se verifica en el mismo sentido de aquel. Presentan una espira en la que cada vuelta está formada por dos celdillas opuestas desde su principio hasta su mayor crecimiento; así es que siempre son oblongas, ovales ó prolongadas. Como todas las Agathistegas, las Spiroloculinas se encuentran vivas y fosiles solo en los ter- renos terciarios, sin manifestarse en las capas mas inferiores. Conocemos veinte y dos especies, de las cuales doce vivas, cuatro del Mediterraneo, tres de las Antillas, dos de la India, una de las costas de Francia en el Oceano, una de la Oceanía y una de Tenerife. Las especies fosiles son tres de los terrenos subapeninos de Italia, tres de los terrenos terciarios de Paris, dos de Dax, una de Burdeos, una del crag de Suffolk. N° 83. SPIROLOCULINA ANTILLARUM. — (d'Orb.) LAM. IX, FIG. 3 y 4. SPIROLOCULINA. Testa oblonga, compressa, longitudinaliter striata; alba, antice elongata , postice obtusa, margine rotundata; loculis angustatis, con- vexis, suturis excavatis; apertura subrotundata, unidentata , dente simplici. Dimensiones. Болйшд............... AA `h de millim. Concha oblonga, mui comprimida, estriada á lo largo y regularmente estrechada y prolongada 30 150 FORAMINIFERAS. por delante, obtusa por detras, con el contorno convexo y no aquillado. Celdillas numerosas, es- trechas, arqueadas, abombadas igualmente por todas partes, mui estrechadas y prolongadas por delante, ensanchadas por detras y separadas por suturas profundas. Abertura redonda, situada en la extremidad de la prolongacion de la última celdilla y provista de un diente sencillo, saliente y mui pronunciado. Color blanco de leche. Por sus estrías longitudinales esta especie se acerca evidentemente á nuestra SpImoLOCULINA striata de las islas Sandwich, la única que sepamos esté dotada de los mismos caracteres; sin em- bargo, se distingue por una forma menos нешеу mas ану, mas graciosa, por estrías mas regulares y en fin por un dorso redondeado y no i No hemos encontrado esta especie mas que en las arenas de la isla de Cuba, donde parece rara. N° 84. SPIROLOCULINA ORNATA. — (ФОгб.) LAM. Хп, FIG. 7 y Ta SPIROLOCULINA. Testa oblonga, сотргеѕѕіѕѕіта , alba, antice acuminata, postice obtusa, margine bicarinata; loculis angustatis, dorso bicarinatis, latere bicostatis, costis interruptis; apertura angustata. , р р 8 Dimensiones. Люпуй@,.............. рима ОЛИ ‚ */s de millim. Concha oblonga, excesivamente comprimida, marcada de lados : dos espaciados sobre el con- torno forman una quilla doble y cortante; despues por cada lado en la parte inferior de cada celdilla se notan otras dos costillas oblicuas, interrumpidas, salientes, continuándose una sola por detras. Celdillas estrechas, arqueadas, adelgazadas por delante, ensanchadas y obtusas por detras, separadas por suturas profundas. Abertura cuadrada, situada en la extremidad de una pro- longacion bastante larga. Color blanco uniforme. Solo la SproLocuLma bicarinata fosil de las cercanías de Paris nos ofrece por sus costillas late- rales alguna analogía con esta especie; pero difiere esencialmente por tres costillas por cada lado en lugar de dos, lo mismo que por la disposicion interrumpida de éstas mismas. La hemos descubierto en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra. Es mui rara. No 85. SPIROLOCULINA POEYIANA. — (dOrb.) LAM. X, FIG. 1 y 2. SPIROLOCULINA. Tesia oblonga, minime compressa, alba, longitudinaliter striata, antice elongata, margine rotunda; loculis convexis, dorso convexis, lateraliter acute carinatis ; apertura rotunda, dentata; dente lateraliter digitato. Dimensiones. Додейша.................. А patos IN 2/3 de millim. Concha oblonga, poco comprimida, mui elevada por cada lado comparativamente á las demas, estriada longitudinalmente, pero con poca regularidad ; alargada y prolongada en tubo hácia ade- FORAMINIFERAS. 151 lante, obtusa por detras; redonda y convexa en su contorno. Celdillas poco numerosas, estrechas en el sentido del enroscamiento, con el dorso redondeado, mui d aqui- lladas en los lados, mas estrechas por delante que por detras, separadas por suturas bastante pro- fundas. Abertura redondeada, provista de cerquillos situados en la extremidad de la última celdilla y provista de un gran diente estrecho en su base, ensanchado en su extremidad y presentando por cada lado una salida digitada bien marcada. Color blanco uniforme. Por su dorso redondeado y las quillas laterales de las celdillas, lo mismo que por la grande anchura transversal de ellas, esta especie tiene relacion con nuestra SPIROLOCULINA elongata y S. pulchella, al paso que se distingue de estas dos especies por las estrías de que está adornada. La hemos encontrado en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Martinica. Es rara. 2: FAMILIA. MULTILOCULIDAE. — (FOrb.) Concha libre, regular, inequilátera; compuesta de celdillas apelotonadas en tres, cuatro ó cinco caras opuestas por cada lado del eje, no pudiendo tener parte alguna par. 1° SECCION. Apelotonamiento de celdillas en tres caras opuestas; tres celdillas aparentes. GÉNERO 5°. TRILOCULINA. — (FOrb.) Concha libre, inequilátera, globulosa б comprimida, teniendo la misma forma en todas edades. Apelotonamiento en tres caras opuestas. Celdillas cubriéndose y por lo mismo nunca hai mas que tres aparentes; su cavidad sencilla. 4bertura única, redonda ú oval, puesta alternativamente ya en una ya en otra extremidad del eje longitudinal y armada de un diente mas ó menos complicado. (MopkLEs , по 93, 94 y 95, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. Por la contextura, por el aspecto general, estas conchas tienen la mayor semejanza con las BiLocuLIÑA y otras Agathistegas; sin embargo, se distinguen de este gé- nero por el opelotonamiento de sus celdillas en tres caras en lugar de dos; así siempre se ven tres celdillas aparentes , mientras que solo se ven dos en las BiLocuLINA, y cinco en las QuivquELo- CULINA. Las Articulinas tienen tambien como las Triloculi el apelotc i de las celdillas en tres caras opuestas ; pero en lugar de conservar este modo de crecer en todas edades, se proyectan en línea recta en la edad adulta, lo que las hace diferenciarse esencialmente de estas últimas. Todas lâs especies de Triloculinas conocidas están ó vivas actualmente en los mares ó solo fo- siles en los terrenos terciarios. Hemos dibujado cincuenta y una especies, así repartidas : treinta y nueve vivas y doce fosiles. De las primeras tenemos catorce solo de Cuba y las Antillas, cinco de las Canarias, cuatro del mar Adriático, cuatro del Mediterraneo, cuatro de la India, tres de la isla 152 FORAMINIFERAS. de Santa Elena, una del mar Rojo, una de las costas de Francia en el Oceano, una de Rawack, una del Perú, una de la Patagonia; así este género numeroso en especies está actualmente repar- tido poco mas ó menos en todos los mares. Las especies fosiles son doce, de las cuales cuatro de los terrenos terciarios de las cercanías de Paris, cuatro de Dax, dos de la Turena, una de Burdeos, una del crag de Suffolk, sin contar las que en los terrenos subapeninos de Italia y de las cerca- nías de Viena son las análogas fosiles de las especies vivas que nos presentan el Adriático б el Mediterraneo. No 86. TRILOCULINA GUALTIERIANA, — (d'0rb.) LAM. IX, FIG. б, 7. TriocuLina. Testa oblongo-elongata, triangulato-compressa, longitudina- liter tenuiterque substriala, alba, antice posticeque obtusa , margine convexa ; loculis elongatis, elevatis; apertura peristomata, unidentata; dente elongato, simplici. Dimensiones. Longitad .......›........ 3 puntos. 'һ millim. Concha prolongada, oblonga, formando un triángulo obtuso mui redondeado, señalado á lo largo por estrías fijas irregulares, mui poco aparentes; sus extremidades son obtusas y redondeadas, su contorno mui convexo, redondeado. Celdillas abombadas, prolongadas, arqueadas, formando un cilindro un poco comprimido, anchas por igual en toda su longitud, todas separadas por suturas profundas. 4bertura prolongada, oblicua, bordeada de cerquillos, provista de un diente largo y prolongado, sencillo y estrecho en su base. Color blanco de leche uniforme. Esta concha tiene un poco de la forma oblonga de nuestra Ткп.осшлхх elongata de Rawack ; lo mismo que aquella es un poco gibosa, pero se distingue por sus estrías siendo la otra lisa, por su forma mas comprimida, por su boca prolongada y no redonda y por un diente mucho mas largo. Hemos encontrado esta concha en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra. Es bastante rara. N° 87. TRILOCULINA FICHTELIANA. — (d'Orb.) LAM. IX, FIG. 8, 10. TriLocuLIÑNA. Testa orbiculato-convexa, alba, longitudinaliter striata , antice posticeque obtusissima, margine convexa, rotunda; loculis magnis , arcuatis , globulosis; suluris excavatis; apertura magna, transversali, ovali, uniden- tata, dente brevissimo , acuto. Dimensiones. Diámelro.............. ПОЕ 1/6 de millim. Concha suborbicular, mui convexa, inflada, mui obtusa en sus extremidades, marcada á lo largo por grandes estrías regulares; su contorno mui redondeado, convexo. Celdillas anchas, abomba- FORAMINIFERAS. 153 das, mui arqueadas, formando un semicilindro deprimido, separadas por suturas mui profundas. Abertura oblicua, oval transversalmente, rodeada de un peristomo ancho un poco reflexo, armada de un dientecito corto, sencillo y agudo. Color blanco uniforme. Por su grande anchura, su forma casi circular, esta especie se aproxima á la Ткшосоима subor- bicularis y T. flavescens, distinguiéndose al mismo tiempo de la primera por una forma mucho mas abombada, por suturas menos sinuosas y la tercera celdilla mucho mas aparente; de la se- gunda porque está estriada en lugar de ser lisa y porque tiene menos convexidad. La hemos encontrado raramente en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Jamaica, recojidas por M. Fernando de Candé. Todavía es mas rara en la Jamaica. N° 88. TRILOCULINA LINNEIANA. — (40r0.) LAM. IX, FIG. 11, 13. TRILOCULINA. Testa oblonga, convexa. alba, antice posticeque obtusa, margine convexa; longitudinaliter costata; loculis convexis, arcuatis ; cos- tis acutis septem, vel quatuor ornatis; apertura rotunda, unidentata, dente bifurcato. Dimensiones. Голайп4............... ОРОТ A 1 de millim. Concha oblonga, mui convexa, inflada, obtusa por detras, truncada por delante, redondeada en su contorno y con grandes costillas á lo largo; las costillas mui agudas, en número de seis á siete por celdilla, pero á veces muchas menos, porque sucede con frecuencia que faltan las costillas la- terales, y la costilla dorsal tomando mayor crecimiento hace parecer á la concha como aquillada; en casi todos los individuos se notan entre las costillas estrías irregulares finas. Celdillas abom- badas, prolongadas, arqueadas, formando un cilindro redondeado, mucho mas ancho por detras que por delante ; todas separadas por suturas profundas. 4bertura redonda, rodeada de cerquillos y provista de un diente estrecho en su base y despues bifurcado en su extremidad en dos brazos oblicuos. Color blanco de leche uniforme. De todas las especies que conocemos es la única que tiene costillas tan grandes, y solo este caracter basta para distinguirla de todas las demas. La hemos encontrado comunmente en las arenas de la isla de Cuba y en las de la Jamaica; pero parece mas variable en el número de costillas en las de la Jamaica que en las de Cuba. N° 89. TRILOCULINA QUADRILATERALIS. — (401b.) LAM. IX, FIG. 14, 16. TRiLocULINA. Testa oblonga, angulata, alba, rugosa, antice elongata , trun- cala, postice obtusa; loculis quadrilateralibus, dorso subplano, lateraliter carinalo; apertura quadrilatera , unidentata ; dente elongato, truncato, simplici. Dimensiones. Longitud . 2 puntos.. 2... 3 de millim, Concha oblonga, mui angulosa, convexa, un poco rugosa, á veces irregular, obtusa por detras, 31 154 FORAMINIFERAS. prolongada por delante, angulosa en su contorno. Celdillas cada una cuadrilátera, en ángulos agudos aquillados ; ensanchadas, arqueadas, en forma de báculo por detras, estrechadas y un poco proyec- tadas por delante, con el dorso un poco abombado y formando un ancho espacio plano, y otros dos cada uno por su lado; cada celdilla viene á ajustarse con las precedentes casi en ángulo recto. Abertura cuadrangular, sin peristomo reflexo, armada de un diente largo, sencillo, estre- cho en su base, truncado en su extremidad. Color blanco uniforme. Por sus celdillas cuadrangulares se aproxima un poco á nuestra TriocuLia bicarinata, que como ella es de las mas angulosas, distinguiéndose al mismo tiempo por su superficie lisa б apenas rugosa, mientras que está llena de pequeñas cavidades en la especie á quien la comparamos, que se diferencia aun por su Боса. Esta especie, bastante comun en las arenas de la isla de Cuba, es mui variable en su forma, á veces mas acortada y mas irregular que la figura que damos. N° 90. TRILOCULINA PLANCIANA. — (d'Orb.) ҺАМ. IX, FIG, 17, 19. TniuocuLina. Testa oblongo-depressa, nitida , alba, longitudinaliter minime rugosa, antice posticeque oblusa, margine rotundata, loculis arcuatis, con- vezis , antice angustatis, postice dilatatis, dorso subangulatis; apertura ovali, unidentata; dente elongato , ad extremam partem dilatato. Dimensiones. Longitad.............. a анг AR AA 'з de millim. Concha oval, comprimida, marcada á lo largo por rugosidades mui finas ó estrías pequeñitas interrumpidas poco visibles ; sus extremidades son obtusas, mas redondeadas por detras ; su con- torno convexo y, sin embargo, inclinándose un poco á modo de visel. Celdillas abombadas, pro- longadas, arqueadas, mas anchas por detras que por delante, donde están truncadas; su dorso un poco anguloso, las suturas poco convexas. Abertura oval longitudinalmente, sin peristomo reflexo, armada de un diente mui largo igual en toda su longitud, provista en su extremidad de un ensan- che lateral por cada lado, en ángulo recto con lo restante. Color blanco de leche, la boca ama- rillenta. Por su forma un poco comprimida y angulosa esta especie se aproxima á la Ташосоима oblonga, á pesar de ser mucho mas ancha, menos oblonga, rugosa y no lisa y con el diente terminado en un cerquillo en lugar de ser simple. La hemos observado en las arenas de Cuba, recojidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Ja- maica, traidas por M. de Candé. Es bastante comun. N: 91. TRILOCULINA SCHREIBERIANA. — (d'Orb.) LAM. IX, FIG. 20, 22. TriLocULINA. Testa ovata, sublriangulari, convexa, nitida, alba, antice pos- ticeque obtusa, margine rotundata ; loculis magnis, minime arcuatis , convexis, dorso rotundato; apertura subrotundata , unidentata , dente brevi, simplici. FORAMINIFERAS. 155 Dimensiones. Гопойай............... puntos Оо %/ de millim. Concha oval, mui convexa, un poco triangular en su totalidad, lisa, brillante, obtusa en sus ex- tremidades, de contorno convexo, redondeado. Celdillas mui abombadas, grandes, casi iguales en su longitud, con el dorso mui redondeado, mui ancho, un poco anguloso cerca de las suturas, las que son profundas. Abertura redonda, pequeña, sin cerquillo, armada de un diente sencillo, recto y corto. Color blanco de leche. La única especie соп la que ésta tiene realmente relaciones es la TrinocuLima unidentata del Me- diterraneo, pareciéndosele por sus anchas celdillas, su forma un poco triangular, su abertura provista de un diente sencillo; relaciones evidentes hasta tal punto que queriamos reunir á las dos соп un solo nombre; pero habiéndonos determinado la distancia de habitacion á examinarlas con mayor cuidado hemos reconocido que las celdillas están contorneadas en forma deS en la Trito- солма unidentata y solo arqueadas en aquella ; que la tercera celdilla es tambien en la Ташосоиха Schreiberiana mucho mas pequeña, y en fin que su tamaño es siempre la quinta parte de la otra. La hemos encontrado simultaneamente en las arenas de la isla de Cuba, en las de la Jamaica y la Martinica, lo que nos induce á creer que habita en todas las Antillas; pero no es comun. № 92. TRILOCULINA OBLONGA. — (#Orb.) ҺАМ. X, FIG. 3,5. Vermiculum oblongum, Montagu, 1, Test. brit., р. 522, t. XIV, fig. 9. — Ver- miculum oblongum, Flemming , Mem. of the Werner. Soc. 1V, part. п, р. 565. — Triloculina oblonga , d'Orb., 1825, Tab. méth. des Céphal., р. 134, n° 16. — Triloculina oblonga, d'Orb., 1825, Movtres, n° 95, 4° livraison. TriLocuLiNa. Testa oblonga, triangulari, convexa, nitida, alba, antice truncata, postice rotundata, margine subcarinata; loculis elongatis , subtrian- gularibus , dorso subangulatis ; apertura rotunda, unidentata; dente simplici. Dimensiones. Longitud .... 3 puntos. ‚у millim, Concha oblonga, convexa, triangular, lisa, brillante, obtusa y redondeada por detras, truncada por delante, con el contorno lijeramente aquillado. Celdillas un poco triangulares, en ángulo ob- tuso, formando un cayado por detras, rectas por delante, las suturas apenas marcadas y sin ser cóncavas. Abertura redondeada, sin cerquillos, armada de un diente sencillo y corto. Color blanco uniforme. Esta especie por su forma oblonga se aproxima 4 nuestras TriLocurixa leevigata del Mediterraneo y Т. elongata de Rawack, al paso que se distingue de las dos por sus celdillas triangulares en lugar de ser redondas ; se diferencia aun por la falta de peristomo en la abertura. Encontramos esta especie viva en el mar Adriático, en el Mediterraneo, en las costas del Oceano en Francia, en Inglaterra, en las Antillas, y fosil en los terrenos terciarios de Italia y aun en los de Burdeos y de Dax. 156 FORAMINIFERAS. N° 93. TRILOCULINA BRON TARTIANA. — (d'Orb.) AMIGO SS Truocuiva suborbicularis, d'Orb., 1825, Tabl. méth, des Céphal., р. 134, п° 23, TRILOCULINA. Testa oblonga, gibbosa, convexa, alba, longitudinaliter striata, antice acuminata , subrostrata , postice rotundata, margine rotundata; loculis elongatis , gibbosis , dorso convexis , antice acuminatis; apertura rotunda uni- dentata, dente simplici. Dimensiones. Гопетпа.....,............ 3 ртов. ооо ооо 1/, millim. Concha oblonga, convexa, un poco gibosa, finamente estriada en su longitud, obtusa por detras, acuminada y ganchosa por delante; contorno convexo, de ningun modo anguloso. Celdillas ar- queadas,gibosas, redondeadas por detras, dismi do gradual de diámetro hácia adelante hasta la parte anterior, donde se estrechan aaa para formar la delicada prolongacion de la abertura. Abertura pequeñísima, redonda, provista de un dientecito obtuso y sencillo. Color blanco uniforme. Por su pico difiere esencialmente de todas las demas especies estriadas, como nuestras TriLocu- iva cylindrica, T. reversa; por sus estrías se distingue de la T. deformis, igualmente provista de una estrechez anterior, pero lisa. La hemos encontrado fosil en las arenas de los terrenos terciarios subapeninos de Italia: viva en las Antillas, donde es rara. N° 94. TRILOCULINA SUBORBICULARIS. — (4Orb.) LAM. X, rc 9, 11. TriLocuLINA suborbicularis, d'Orb., 1825, Tabl. méth. des Céph., р. 134, по 12. TriLocuLIÑNa. Testa orbiculato-compressa, alba, longitudinaliter, tenuiter striata, antice posticeque rotunda, margine convexa; loculis magnis , arcuatis, inflatis, suturis impressis; apertura mediocri, rotunda, unidentata , dente brevi, simplici , obtuso. Dimensiones, Ю@те®о.............. о 1/5 de millim. Concha suborbicular, mui comprimida, mui obtusa en sus extremidades, redondeada en los bor- des, finamente estriada á lo largo. Celdillas mui anchas, arqueadas, formando cada una un semi- círculo ; la última inflada en los lados ; la del medio mui poco aparente, en parte cubierta por las demas; suturas profundas, bastante marcadas. 4bertura redonda, sin peristomo, armada de un diente corto y sencillo bastante grueso. Color blanco de leche uniforme. FORAMINIFERAS. 157 Por su forma orbicular y sus estrías longitudinales esta especie se parece á nuestra TrILOCULINA Fichtelli, pero es mucho mas comprimida; su celdilla media apenas es aparente en lugar de tener una ancha salida, y su abertura está sin peristomo y pequeña, mientras que es ancha y bordeada Че cerquillos en la otra. La hemos encontrado en las arenas de las Antillas, donde es rara. N° 95. TRILOCULINA LABIOSA, — (4'070.) ТАМ. X, FIG. 12, 14, TRILOCULINA. Testa tuberosa, convexa, alba, levigata, nitida, lateraliter expansa, antice posticeque obtusissima, margine convexa; loculis globulosis, inflatis, oblongatis, suluris excavatis; apertura transversaliter elongata , angustata. Dimensiones. Р@тето.............. 11б рамоз........ o... "ls de millim. Concha globulosa, convexa, lisa, brillante, con el contorno redondeado, sumamente obtusa por delante y por detras; los lados mui dilatados, lo que la hace ser mas ancha que alta. Celdillas mui globulosas, oblongas, casi piriformes ; su parte posterior mui inflada, despues adelgazada hácia las partes anteriores ; la tercera con frecuencia colocada regularmente en medio de las otras dos, pero tambien sobresaliendo con frecuencia en la extremidad anterior como en nuestra figura 12, lám. X. Las suturas son mui profundas y lisas. 4bertura mui grande, transversal, estrecha y larga, bordeada de un cerquillo pronunciado; provista de un diente tan ancho y tan obtuso que repre- senta un segundo cerquillo superior y forma con el peristomo como dos labios entreabiertos. Color blanco de leche uniforme. Su forma mas ancha que alta, el grosor de sus celdillas, la hacen parecerse un poco á muestra Тап.осшлха inflata del Mediterraneo у á la Т. flavescens de las costas del Oceano en Francia; pero menos disforme y mas lisa que la primera, su boca es del todo distinta. Difiere de la segunda рог menos convexidad y por su boca transversal en lugar de ser redonda. Esta especie es bastante comun en las arenas de Cuba. No 96. TRILOCULINA CARINATA. — (d'Orb.) ПАМ. X, FIG 15, 17, TRILOCULINA. Testa ovato-oblonga, compressa, alba, profunde variolata, antice truncata, postice rotundata; margine acute carinata; loculis compres- sis, dorso carinatis, antice angustatis; apertura elongata , limbata , uniden- tata, dente angustato, elongato , simplici, truncato. Dimensiones, Гопейп4............... 8 райо. ssis ees ‘> millim. Concha oval ú oblonga, mui comprimida, cubierta de escavacioncitas por líneas oblicuas que la hacen ser como virolenta ; redondeada por detras, truncada por delante; contorno sumamente ca- 32 158 FORAMINIFERAS. renado y cortante. Celdillas mui comprimidas, arqueadas, ensanchadas por detras, estrechadas por delante, separadas por suturas poco marcadas. 4bertura prolongada en el sentido de la com- presion, anchamente orillada de cerquillos, armada de un gran diente largo, sencillo y truncado en su extremidad. Por las escavacioncitas de que está cubierta la concha, se aproxima á la TriLocuLisa reticulata de la isla de Santa Elena, distinguiéndose al mismo tiempo de esta especie por sus celdas aquilladas en vez de ser redondeadas y convexas; por lo demas, de todas las especies que conocemos hasta ahora es la mas ади а y la mas comprimida. Le hemos descubierto en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra: es rara. No 97. TRILOCULINA BICARINATA. — (4'Orb.) LAM. X, FIG. 18, 19 y 20. TriLocuLINA. Testa ovato-convexa, alba, profunde excavato-variolata, an- tice posticeque obtusa, margine bicarinata; loculis quadrilateralibus, dorso subcomplanatis lateraliter carinatis; apertura ovali , unidentata. Dimensiones. Longitud... E a E E A Y de millim. Concha oblonga, mui angulosa, convexa, obtusa en sus extremidades, cubierta de escavacioncitas cuadrangulares por líneas oblicuas casi transversales que la hacen parecer jaspeada ó reticulada; cada escavacion está guarnecida de cerquillos mui elevados; su contorno está doblemente aquillado. Celdillas cada una de ellas cuadrilátera, en ángulos agudos, aquillados; arqueadas en su longitud y poco mas ó menos iguales en anchura; el dorso escavado y aquillado por cada lado. Abertura oval, provista de un diente sencillo, poco saliente. Color blanco ó un poco amarillento. Por la forma cuadrangular de sus celdillas esta especie tiene muchas relaciones con la TriLocu- зама quadrilatera, de la que se distingue por sus escavaciones reticuladas; es vecina de las T. ca- rinata y Triloculata por estas mismas escavaciones, diferenciándose de las dos por sus celdillas cuadrangulares y no comprimidas б redondeadas. Esta linda especie es rara en las arenas de Cuba, donde la hemos descubierto. N° 98. TRILOCULINA EBURNEA. — (d'Orb.) ТАМ. х, БІС. 21, 23, TriocuLina. Testa oblonga, minime compressa, nitida, leevigata, lactea, an- tice posticeque obtusa, margine convexa; loculis elongatis, rotundis, dorso convexis ; suturis subcomplanatis; apertura fere aperta; dente elongato, magno. Dimensiones. Longitud ....o..oo..... 1 !/a puntos. о 1/4 de millim: Concha oblonga, convexa, lisa, brillante, igualmente obtusa en sus extremidades, con el contorno redondeado. Celdillas prolongadas, casi iguales en su longitud, con el dorso mui redondeado ; su- FORAMINIFERAS. 159 turas mui poco marcadas, no escavadas. Abertura mui prolongada, ensanchada lateralmente en su extremidad, teniendo absolutamente la forma del diente que la cierra casi herméticamente, dejando á su alrededor solo una pequeña hendidura lineal. Color de un hermoso blanco de leche ó de marfil. Prolongada como nuestras TrILOCULINA leevigata, T. elongata y T. oblonga, es mucho mas cilin- drica que éstas, de suturas mucho menos marcadas y su tercera celdilla mucho mas pequeña. Todavía se distingue, lo mismo que de todas las especies conocidas por nosotros, por la singula- ridad de su abertura á la que su diente cierra casi herméticamente. Hemos descubierto esta linda especie en las arenas de la isla de Cuba, traidas por D. Ramon де la Sagra. Como solo hemos encontrado un individuo debemos suponer que es rara. N° 99. TRILOCULINA GRACILIS. — (d'Orb.) LAM. XI, FIG. 10, 12, TRILOCULINA. Testa elongata, gracili, convexa, nitida , alba, longitudinaliter, irregulariter striata, antice posticeque elongata, margine rotundata; loculis flexuosis, elongatis, antice truncatis; apertura rotunda unidentata, dente simplici , peristomate reflexo, magno. Dimensiones. Longitud tolal............. 1 */, puntos. . КҮЛ? Concha mui prolongada, estrecha, bastante convexa, marcada á lo largo y un poco oblicua- mente de lijeras estrías mui interrumpidas ; un poco acuminada en sus extremidades, con el contorno convexo. Celdillas mui estrechas, flexuosas, un poco contorneadas en S, mas anchas por detras que por delante, donde terminan en un boton que forma el reborde saliente de la abertura. Abertura redonda, provista de un diente sencillo y corto, el peristomo ancho, reflexo. Color blanco uniforme. Esta especie difiere de todas las demas por su forma mui prolongada, por sus celdillas contor- neadas, por las lijeras estrías que la adornan, lo mismo que por su ancho peristomo, caracteres que no se encuentran reunidos en ninguna otra Triloculina. Hemos encontrado esta concha en la arena de las islas de Cuba y de la Jamaica, donde es rara. GÉNERO 6°. CRUCILOCULINA. — (d'Orb. Concha libre, inequilátera, triangular, teniendo la misma forma en todas edades. Apelotona- miento en tres caras opuestas. Celdillas cubriéndose y por lo mismo sin que halla nunca mas que tres aparentes. Abertura única en forma de cruz ó provista de dos dientes en contacto por la ex- tremidad. (Monéres, no 112, 5e livraison.) Relaciones y diferencias. Este género, absolutamente enroscado como las Triloculinas y te- niendo todos sus caracteres, difiere por su abertura representando una cruz, mientras que es redonda ú oval en las Triloculinas. ў Todavía no conocemos mas que una sola especie de las partes del Sud de Patagonia. 160 FORAMINITERAS. GÉNERO 7°. ARTICULINA. — (d¿Orb.) Concha libre, inequilátera, prolongada, en la juventud formada por un apelotonamiento en tres caras, despues proyectándose en línea recta. Celdillas en la juventud se cubren de modo que solo resultan tres aparentes ; despues, ya mas adelantada, la concha deja de crecer рог apelotonamiento y continua en línea recta como las Nodosarias. Abertura única, dentada ó no. (MonáLes, n° 22, 1re livraison.) Relaciones y diferencias. En la juventud las Articulinas son verdaderas Triloculinas; la única diferencia genérica que existe entre estos dos géneros es que las Triloculinas durante el creci- miento siguen siempre una marcha uniforme de apelotonamiento, mientras que las Articulinas en cierta edad abandonan este modo de crecer para proyectarse en línea recta, como las Nodo- sarias y las demas Stichostegas. No conocemos mas que dos especies de este género, una fosil de los terrenos terciarios de las cercanías de Paris; la otra, que vamos á describir, se halla viva en la isla de Cuba. N- 100. ARTICULINA SAGRA. — (d4Orb.) ES PES PX ARTICULINA. Testa elongata, compressa, alba, longitudinaliter costata, antice dilatata , truncata , postice obtusa; loculis oblongatís , compressis , ven- tricosis ; antice dilatatis; apertura magna, ovali; peristomate crasso, luto, reflexo. Dimensiones. Болдиш@,............. КО anto E E SA ‘h de millim, Concha prolongada, recta ó arqueada, comprimida, marcada á lo largo de costillas poco eleva- das; obtusa y redondeada por detras, dilatada y truncada por delante. Celdillas oblongas, un poco comprimidas, infladas y abombadas por detras, sumamente dilatadas y truncadas por delante, estrechadas entre estas dos partes. 4bertura ancha, oval ó sinuosa, provista de un peristomo mui ancho y reflexo. Color blanco uniforme. Esta linda especie, la única viva que conocemos, difiere de la Articunisa nitida, fosil de Paris, por sus celdillas comprimidas y no redondas, por su abertura oval y ensanchada, mientras que es redonda y pequeña en la otra. La hemos descubierto en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Ja- maica y Martinica, recojidas por M. Fernando de Candé; debemos por lo mismo suponer que se halla en todas las Antillas. 2: SECCION. Apelotonamiento de celdillas en cuatro caras opuestas; cuatro celdillas aparentes. FORAMINIFERAS. 161 GÉNERO 8. SPHAEROIDINA. — (dOrb.) Concha libre, inequilátera, globulosa, esferoidal, conservando la misma forma en todas edades. Apelotonamiento al rededor, en cuatro caras opuestas. Celdillas cubriéndose de suerte que nunca quedan mas que cuatro aparentes y con cavidad sencilla. 4bertura única, situada en el lado de la última celdilla, cerca de la aparente mas antigua y que va á ser cubierta la primera. Un diente sen- сШо. (Monkxzs, по 8, 1" livraison.) Relaciones y diferencias. Este género, como todos los demas, es de una contextura compacta, tiene como ellos la boca armada de un diente, distinguiéndose, sin embargo, en que sus celdillas no están enroscadas en dos, en tres, ni en cinco caras, sino en cuatro. Este apelotonamiento nos habia sor- prendido hace mucho tiempo; haciendo las celdillas en los géneros BiLocuLINA, TRILOCULINA, SPIROLOCULINA, FaruLarIa y QuiyqueLocuLINA solo una media revolucion al rededor del centro, era materialmente imposible que el mismo apelotonamiento se verificase sin número impar; por lo mismo el crecimiento en cuatro caras opuestas de las Spheroidinas es del todo diferente, puesto que se verifica en cuatro caras distintas, como piezas aplicadas unas sobre otras y no á lo largo, al rededor de un eje longitudinal. Habiendo al principio comprendido mal el modo de crecer de este género, que tan difícil es de seguir, le habiamos colocado en 1825 en nuestro primer trabajo entre las Enalostegas, mas hoi dia creemos que debe pertenecer á las Agathistegas. No conocemos mas que una sola especie viva en el Adriático y fosil en las cercanías de Sienna. 3* SECCION. Apelotonamiento de celdillas en cinco caras opuestas; cinco celdillas aparentes, GENERO 9. QUINQUELOCULINA. — (dOrb.) Concha libre, inequilátera, globulosa ó comprimida, redondeada ó angulosa, teniendo la misma forma en todas edades. A4pelotonamiento en cinco caras opuestas. Celdillas cubriéndose de modo que nunca resultan mas que cinco aparentes; su cavidad sencilla. 4bertura única provista de un diente simple ó compuesto. (MovéLes, по 8, 1" livraison; n% 32 y 33, 2° livraison; n° 96, де livraison.) Relaciones y diferencias. La contextura y el aspecto general son los mismos que en las Bilocu- linas y las Triloculinas; pero el modo de crecer no es semejante. Las celdillas en lugar de apelo- tonarse en dos ó tres caras al rededor del eje, se apelotonan en cinco; así en toda edad no se ven mas que cinco celdillas aparentes, tres por un lado y dos por otro, mientras que en los otros géne- ros se ven dos ó tres solamente. Hemos dibujado y descrito ochenta y siete especies de este género, de las cuales sesenta y cinco son vivas y veinte y dos fosiles. Entre las especies vivas diez y ocho son de la isla de Cuba y de las Antillas en general, diez son del Mediterraneo, cinco del Adriático, cuatro de las costas fran- cesas del Oceano, cuatro de la India, cuatro de Tenerife, tres de Rawack, tres del mar Rojo, tres 33 162 FORAMINIFERAS. de la isla de Santa Elena, tres del Perú, cinco de la costa de Patagonia, una del cabo de Buena Es- peranza, una de Madagascar, una de las islas Sandwich del mar del Sur; así es que poco mas б menos están repartidas en el litoral de todas las costas. Tocante á las veinte y dos especies fosiles, todas pertenecen solamente а los terrenos terciarios, trece son del depósito de Paris, tres de las capas subapeninas de ltalia, dos de Burdeos, dos del depósito de la Turena, dos del crag de Suffolk en Inglaterra. No se encuentra vestigio alguno de ellas en la formacion cretacea. No 101. QUINQUELOCULINA PLANCIANA. — (4Orb.) LAM: ‘X, FIG. 24, 95; LAM. хт, FIG. б. QUINQUELOCULINA. Testa ovata, compressa, alba, subrugosa, antice angu- lata, postice subrotundata , margine subcarinata; loculis triangulato-inflatis , arcuatis; apertura longitudinaliter ovata, unidentata, dente elongato, bi- furcato; peristomate simplici. Dimensiones. Болейай............. ПРА ав de millim. Concha oval, comprimida, un poco rugosa, brillante, como gibosa, un poco acuminada por de- lante, obtusa por detras, con el contorno casi aquillado. Celdillas arqueadas, prolongadas, casi iguales en su longitud, truncadas por delante, con el dorso lijeramente aquillado, sus suturas apenas marcadas. 4bertura oval en el sentido del apelotonamiento, con bordes sencillos, provista de un gran diente saliente prolongado y bifurcado en su extremidad. Color blanco de leche uniforme. Un poco vecina de la QuisourLocuLIÑA semilunum del Mediterraneo por su forma general, difiere, sin embargo, por una quilla mucho menos cortante, pues apenas está marcada, y por el diente de su abertura del todo distinto, bifurcado en su extremidad y no simplemente ensanchado. Hemos encontrado esta especie en la arena de la isla de Cuba, recojida por el Sr. de la Sagra, y en la de la isla de Santo Tomas. N° 102. QUINQUELOCULINA GUALTIERIANA. — ( d'Orb.) АШ: SU PiE ЖУО QuinqueLocuLINA. Testa ovato-gibbosa, compressa , alba, lævigata, trans- versaliter undulata, antice truncata, postice obtusa, margine carinata; lo- culis antice angustatis , rectis, truncatis, postice dilatatis, arcuatis, dorso carinatis; apertura longitudinaliter elongata, angustata, unidentata; dente elongato, simplici. +. L '/⁄a millim. Dimensiones. Longitud. En los individuos mayores 9 puntos, . Concha oval, un poco gibosa, mui comprimida, lisa, con lijeras ondulaciones transversales, ir- regulares ; mui ensanchada y truncada por delante, mui obtusa por detras, con el contorno aqui- FORAMINIFERAS. 163 lado, casi cortante. Celdillas comprimidas, gibosas, rectas, adelgazadas y truncadas por delante, ensanchadas y encorvadas per detras, con el dorso aquillado; suturas poco profundas. Abertura prolongada en el sentido del enroscamiento, ensanchada por abajo, sin peristomo, armada de un diente mui largo, estrecho, con la extremidad truncada. Color blanco uniforme. Hai un poco de analogía entre esta especie y la QuisqueLocuLixa secans del Mediterraneo por las ondulaciones transversales ; pero mas convexa, menos ancha, ésta difiere aun por la falta de quilla cortante, por la falta de peristomo revuelto á la boca y por sus celdillas mas gibosas. La hemos observado en las arenas de la isla de Cuba y de la Jamaica, donde es poco comun. N° 103. QUINQUELOCULINA TRICARINATA. — (dOrb.) ЖАМ, ХІ, FIG. 7, 8, 9, 13. QUINQUELOCULINA. Testa elongato-ovata, crassa, convexa, alba, rugosa , longitudinaliter costata vel reticulata, antice posliceque acuminata; loculis sinuosis, tricostatis , ultimo subreticulato ; apertura minima rotunda, uniden- tata; dente bifurcato. Dimensiones. Longitud. . бараан, ан AIN 1 millim. Concha oval, prolongada, densa, mui convexa, rugosa, marcada á lo largo de gruesas costillas salientes, ó sumamente reticulada, mui acuminada y prolongada en punta obtusa en sus extremi- dades. Celdillas salientes, sinuosas, ensanchadas en medio de su longitud, acuminadas en sus ex- tremidades, adornadas cada una de tres costillas longitudinales mas ó menos regulares, pasando en la última celdilla de los individuos viejos á una redecilla poco regular de lados anamostoseados; las suturas son mui profundas. 4bertura circular, situada en la extremidad de una larga prolonga- cion, con bordes sencillos y armada de un diente mui bifurcado en su extremidad. De jóven las tres costillas de cada celdilla son mui regulares. Color blanco uniforme. Por sus tres surcos, por sus celdillas prolongadas hácia adelante, esta especie tiene muchas relaciones con nuestra QuivqueLocuLixa sulcata del mar Rojo; pero se distingue por sus celdillas acuminadas por delante y por detras en lugar de estarlo solo por delante, por mayor convexidad y por una abertura diferente. La hemos encontrado en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la Jamaica, recojidas por M. Fernando de Candé. № 104. QUINQUELOCULINA SAGRA. — (00) h LAM. X5 FIG, 16, 17 y 18. QuUINQUELOCULINA. Testa suborbiculari , angulosa , alba, rugosa, transversaliter costato-reticulata, anvtiae,posticeque obtusa; lo- culis arcuatis, quadrilateralibus, antice angustatis, postit convexa, crassissima, > e dilatato-oblusis, lateraliter transverse costalis, dorso plano reticulato, ulringu ё carinato; aper- tura ovali, unidentata; dente lateraliter ad extremam pan «em dilatato. QS 164 FORAMINIFERAS. Dimensiones. Голдйш@............... 3 pantas ТЕН 1, millim. Concha suborbicular, mui angulosa, mui convexa, densa, rugosa, marcada por costillas inter- rumpidas, y reticulada, con las extremidades mui obtusas. Celdillas mui arqueadas, cuadrangula- res, un poco adelgazadas hácia adelante, mui ensanchadas por detras; cada una formando en el dorso una ancha superficie plana obli y profund reticulada, doblemente aquillada ; las costillas están marcadas de cavidades transversales oblicuas, un poco arqueadas, no legando hasta la quilla, separadas por costillas salientes é irregulares. 4bertura oval, el gran diámetro en el sentido del apelotonamiento de las celdillas, sin cerquillo; armada de un diente largo, estrecho, en cuya extremidad por cada lado hai un apéndice en ángulo recto con lo demas del diente. Color blanco uniforme. No conocemos especie alguna que pueda ser confundida con ésta; tan bien caracterizada está por la reunion de su forma redondeada, sus celdillas cuadrangulares, las costillas y fosetitas de que está adornada. Hemos encontrado esta linda especie en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, al que se la hemos dedicado. Es rara. {бө N: 105. QUINQUELOCULINA LAMARCKIANA. — (d'0rb.) LAM. XI, FIG. 14 y 15. INQUELOCULINA. Testa suborbiculari, convexa, alba, levigata, nitida, Q antice elongato-truncata, postice obtusa; margine carinata; loculis triangu- laribus, arcuatis, sinuosis, antice truncatis, postice subacuminatis, dorso carinatis; apertura ovali , unidentata; dente elongato, simplici. Dimensiones. Колйш@............... Sn 2/ de millim. Concha suborbicular, mui convexa, lisa, brillante, un poco gibosa, prolongada y truncada por delante, redondeada por detras, con el contorno sumamente aquillado, un poco cortante. Celdillas triangulares, estrechas, sinuosas, arqueadas y estrechadas por detras, contorneadas y truncadas por delante, con el dorso aquillado y liso; suturas poco profundas, casi planas. Abertura oval, el gran diámetro en el sentido del enroscamiento, sin peristomo reflexo, armada de un diente largo y sencillo. Color blanco de leche uniforme. Por su forma ancha y abombada se aproxima al mismo tiempo а nuestras QuUINQUELOCULINA vul- garis del Mediterraneo y Q. Cuvieriana de las Antillas, diferenciándose de la primera por sus celdillas mas aquilladas, por su abertura con diente sencillo en lugar de ser bifurcado; de la se- gunda por la falta de estrías cerca de la quilla, por la prolongggion anterior de la última celdilla y por la abertura menos prolongada. Esta especie se halla comunmente en Cuba y en la Jamaica. Ne 106. QUINQUEZJLOCULINA CUVIERIANA. — (d'Orb.) LAM, XI, FIG. 19, 20 y 21. € Q INQUELOCULINA. $ Tesia suborbiculari, convexa, alba, nitida, levigala, Б FORAMINIFERAS. 165 margine carinata, longitudinaliter striata, antice posticeque obtusa; loculis triangulatis, arcuatis, antice truncatis, dorso carinatis; apertura oblonga, identata; dente elongato, a tato, simplici. А O Dimensiones. Diámetro “h millim. Concha suborbicular, gibosa, convexa, reluciente, lisa, sumamente truncada por delante, re- dondeada por detras, con el contorno mui aquillado. Dos ó tres estrías longitudinales acompañan á la quilla por cada lado. Celdillas triangulares, mui anchas, arqueadas, estrechadas por detras, truncadas por delante, con el dorso aquillado, cortante; suturas poco marcadas. Abertura mui prolongada, comprimida, oblonga, sin peristomo saliente, provista de un diente largo, saliente, estrecho y sencillo. Algunos individuos ya viejos nos han mostrado su superficie como arañada, marcada por estrías interrumpidas poco visibles. Color blanco de leche uniforme. Esta especie se parece mucho á la QuivourrocuLiya Lamarckiana por su forma recojida, por su quilla aguda, y difiere por su celdilla truncada y no prolongada hácia adelante, por su quilla mas cortante y acompañada de estrías longitudinales, mientras que es lisa en la otra, y por su boca mas prolongada. La hemos encontrado comunmente en la arena de la isla de Cuba, traida por el Sr. de la Sagra. N° 107. QUINQUELOCULINA BOSCIANA. — (d'Orb.) LAM. XL FIG. 22, 23 y 24. QUINQUELOCULINA. Testa elongato-oblonga, compressa, alba, leevigata, ni- tida, antice truncata, postice obtusa, margine rotundata; loculis Cconvexis, elongatis, minime arcuatis, antice angustatis , postice dilatatis , obtusis, dorso rotundatis ; apertura rotunda, unidentata; dente brevi , Simplici. Dimensiones. /юлейш4............... @ partos as + 'з de millim. Concha prolongada, oblonga, comprimida, lisa, brillante, truncada por delante, redondeada, ob- tusa por detras, con el contorno convexo. Celdillas сопүехаѕ, mui prolong осо arqueadas, mui estrechas por delante, ensanchadas en forma de báculo por detras, con el dorso redondeado, separadas por suturas profundas. Abertura mui pequeña, circular, sin peristomo exterior, armada de un dientecito sencillo y corto. Color blanco uniforme. Mas prolongada que nuestra QuINQUELOCULINA leevigata difiere, lo mismo que todas las demas de la misma forma, por la gran desproporcion de la anchura de sus celdillas, siendo todas mui estrechas por delante y ensanchadas por detras. Hemos descubierto esta lindísima especie en la arena de Cuba, en la de Santo Tomas у la Ja- maica, de donde podemos concluir que es de todas las Anillas. 166 FORAMINIFERAS. Ne 108. QU QUELOCULINA POEYANA. — (d'Orb.) LAM. XI, FIG. 25, 26 y 27. QUINQUELOCULINA. Testa elongata, oblonga, minime compressa, alba, lon- giludinaliter costato-striata, antice posticeque obtusa, margine convexa; loculis convexis, angustalis, minime arcuatis , subeequalibus , dorso rotun- datis; apertura ovata , unidentata. Dimensiones. Longitad. . . 2 puntos.. з de millim. Concha oblonga, prolongada, poco comprimida, marcada á lo largo por estrías profundas, es- paciadas; obtusa en sus extremidades, con el contorno redondeado. Celdillas convexas, prolonga- das, estrechas, iguales en su longitud, poco arqueadas, truncadas por delante, redondeadas por detras, con el dorso redondeado, separadas por suturas poco profundas. 4bertura redondeada, sencilla, sin peristomo, armada de un diente sencillo. Color blanco uniforme como el marfil. Por su grande anchura, por sus estrías longitudinales, se aproxima á la QuivquELOcuLINA costata del Mediterraneo ; sin embargo, se distingue á primera vista por su forma mas oblonga, por sus suturas menos marcadas y sobre todo por la falta del ancho peristomo reflejo que adorna la abertura de la especie. La hemos recojido en las arenas de la isla de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra, y en las de la isla de Santo Tomas : es rara. La hemos dedicado á M. Poey, celoso naturalista de la isla de Cuba. N° 109. QUINQUELOCULINA DILATATA. — (4'Orb.) LAM. хі, Fic. 28, 29 y 30. QuiNQUELOCULINA. Testa orbiculato-dilatata, compressa, alba, leevigata, vel subrugosa, antice posticeque obtusissima, margine convexa; loculis sinuosis, dilatatis, carinatis, dorso rotundatis; apertura obliqua , depressa. Dimensiones. Diámetro... .........o.. 2 ршиоз..........++.+ 1/3 de millim. Concha suborbicular, mui ensanchada en los lados ; por eso es mas ancha que alta, mui compri- mida, lisa en las últimas celdillas, mui rugosa, punteada en las demas, con el contorno convexo, un poco sinuoso. Celdillas mui anchas, comprimidas, mui arqueadas, mas anchas en el medio que en las extremidades, sinuosas еп sus bordes, con el dorso relondeado, separadas por suturas mui marcadas. 4bertura lateral oblicua, prolongada en sentido opuesto al enroscamiento. Color blanco de marfil. И De todas las especies que со, facemos es la mas ensanchada, y la única que existe menos alta que ancha ; tambien es la PAE está lisa en sus últimas celdillas y punteada en las otras. Esta linda especie ha! ¡Dita en la isla de Cuba y en la de Santo Tomas, donde es mui rara. 5 FORAMINIFERAS. . 167 № 110. QU QUELOCULINA AUBERIANA. — (d'Orb.) LAM. Хп, FIG. 1, 2 y 3. QuixouzLocunixa. Testa suborbiculari, convexa, alba, leevigata, transversim undulata, margine carinata, antice posticeque obtusa; loculis convexo-trian- gularibus, arcuatis, antice truncatis, dorso carinatis; apertura ovata, uni- dentata, dente elongato , simplici. Dimensiones. Diámetro “de millim. Concha suborbicular, un poco oval, mui convexa, brillante, lisa, lijeramente ondeada al traves, obtusa en sus extremidades, un poco aquillada en su contorno. Celdillas triangulares, de lados abombados, arqueadas, truncadas por delante, un poco acuminadas por detras, con el dorso lijera- mente aquillado; suturas poco profundas. 4bertura oval, sin peristomo, provista de un diente sen- cillo, prolongado. Color blanco. Habiamos en 1825 confundido esta especie con la QuixqueLocuLixa vulgaris del Mediterraneo, especie á la que se aproxima mucho por sus formas exteriores de ondulaciones еїс.; mas despues de haberla examinado con el mayor cuidado hemos debido separarla, teniendo ésta siempre en la abertura un solo diente sencillo en vez de uno bifurcado. Vecina tambien de las Q. La- marchiana у О. Cuvieriana, difiere por las ondulaciones transversales de que está adornada. Habita en Cuba y la Martinica, donde no es mui rara. No 111. QUINQUELOCULINA ANTILLARUM. — (d¿Orb.) LAM. хи, FIG. 4, 5, 6 y 7. QuixQuELOCULINA. Testa ovato-oblonga, compressa, alba, profunde et obli- que variolata, margine irregulariter carinata , antice posticeque obtusa ; loculis triangularibus , compressis, arcuatis, antice truncatis, dorso gibboso carinatis; aperlura oblonga, infra dilatata, unidentata, dente elongato, bifurcato; peris- tomate acute sinuato. Dimensiones. Юйтето.............. ао ао 1 Ys millim. Concha oval, un poco oblonga, comprimida, irregular, marcada por todas partes de fosetitas redondeadas situadas en líneas oblicuas interrumpidas; mui obtusa en sus extremidades, irregu- larmente aquillada no en el medio de la anchura de las celdillas sino mas en un lado que en otro. * Celdillas triangulares, comprimidas, varias veces abolladas, mui arqueadas, truncadas por delante, obtusas por detras, con suturas poco profundas. Abertura prolongada, comprimida, dilatada en su extremidad y con mucho escape hácia esta parte, armada de un diente mui largo ensanchado en su extremidad y como bifurcado por una escotadura mediana ; peristomo delgado, cortante, reple- gado hácia dentro en los lados de la abertura, un poco reflexo en la extremidad. Cuando la concha es ya de mucha edad está cubierta de ondulaciones transversales bien marcadas (Lám. XII, fig. 7). Color blanco uniforme. \ 168 FORAMINIFERAS Vecina por sus fosetitas y por su quilla de la QuivourLocuLisa variolata de la isla de Santa Ele- na, difiere, sin embargo, por fosetas mas pequeñas, mas aproximadas, por su forma menos re- gular, por una sola quilla en vez de dos, en fin por el diente de su abertura, bifurcado en su extremidad y no sencillo. Es comun en la arena de Cuba y sobre todo en la de la Jamaica. № 112. QUINQUELOCULINA BICOSTATA. — (Orb. LAM. Хп, FIG. 8, 9 y 10. QuINQUELOCULINA. Testa ovata, convexa, alba, leevigata, margine bicostata, antice posticeque obtusa; loculis subquadrilateralibus, regulariter arcuatis , dorso bicostatis; apertura mediocri , rotunda, unidentata , dente brevi simplici. Dimensiones. Diámetro................ nto da ооо e... h milim. Concha oval, ancha, mui convexa, triangular en su totalidad, lisa, mui pulida, obtusa en sus extremidades, bicarinada en su contorno. Celdillas cuadriláteras, bastante anchas, regularmente arqueadas, con las extremidades adelgazadas, con el dorso adornado de dos costillas salientes es- paciadas, cuyo intervalo está profundamente escavado; suturas apenas marcadas. Abertura re- donda, pequeña, armada de un dientecito sencillo y corto ; peristomo sencillo, grueso, no reflexo. Color blanco lechoso. Рог su forma general triangular, por los dos lados de sus celdillas; se parece mucho á la Quix- QUELOCULINA bicarinata de las islas de Sandwich, al paso que se diferencia especificamente por las costillas mas aproximadas, por los lados escavados y no abombados, por celdillas mas iguales y por el diente de su abertura bien distinto. Esta especie es mui comun en la Jamaica; no lo es tanto en Cuba, aunque se halla tambien. No 113. QUINQUELOCULINA AGGLUTINANS. — (d'Orb. LAM. ХИ, FIG. 11, 12 y 13. QuixquELOCULINA. Testa ovata, convexa, alba, irregulari, agglutinante, antice posticeque acuminalo-obtusa, margine subcomplanata; loculis subangu- laribus, arcuatis, antice truncatis, dorso subcomplanatis; apertura ovali, intus denticulata. Dimensiones. Diámetro. ................ G: panoe уч Nela 1 millim; Concha oval, mui convexa, un poco triangular en su totalidad, rugosa, cubierta por todas partes de granitos de arena y otros cuerpos aglutinados y adheridos á la concha, un poco acuminada en sus extremidades, su contorno lijeramente aplastado. Celdillas un poco angulosas, truncadas por delante, acuminadas por detras, con el dorso aplastado y suturas distintas. Abertura oval, pare- ciendo que carece del diente ordinario, pero teniéndole en su contorno interior cubierto de cane- loncitos profundos que hacen А108 bordes como dentados. Color blanquizco uniforme. FORAMINIFERAS. 169 Entre nuestras especies antiguamente observadas encontramos en la QUINQUELOCULINA rugosa algunas lejanas relaciones que son mas evidentes con la Q. enoplostoma, que es tambien agluti- nante; sin embargo, difiere de las dos por su abertura menos complicada, pues carece de diente ordinario, por su quilla menos marcada y por sus ángulos mui embotados y no salientes. Hemos descubierto esta especie en las arenas de la Jamaica, recojidas por M. Fernando de Candé : es rara en las de Cuba. Ne 114. QUINQUELOCULINA ENOPLOSTOMA. — (d'Orb.) LAM. ХП, FIG. 14, 15, 16 уа QUINQUELOCULINA. Testa ovalo-angulosa, convexa, alba, irregulari, aggluti- nante, antice posticegue subacuminata, margine bicarinata ; loculis quadri- lateralibus , arcuatis, antice truncatis, postice acuminatis; dorso complanato, bicarinato, suturis excavatis; apertura ovata, intus periphceriam internam serrata, unidentata, dente elongato, bifurcalo. Dimensiones. Longitud total. ....... З рипѓоѕ...... 1л millim. еп los individuos mayores. Concha oval, mui convexa, mui angulosa, mui rugosa, aglutinante ó cubierta de granitos de arena; un poco acuminada en sus extremidades, con el contorno bicarinado. Celdillas cuadrangu- lares, truncadas por delante, acuminadas por detras, un poco ensanchadas en el medio, con el dorso provisto de una ancha truncadura aquillada en los lados, suturas profundas. 4bertura oval, armada todo al rededor y por adentro de un gran número de dientecitos agudos convergentes hácia el centro y ademas en la parte superior de un diente largo, delicado, bifurcado en su extre- midad en dos ramos oblicuos. Color blanco uniforme. Ninguna especie se aproxima á ésta mas que nuestra QuINQUELOCULINA agglutinans; como ella está cubierta de granitos de arena pegados, tambien su boca está cubierta de dientecitos agudos en el contorno interior; sin embargo, difiere en que los cuerpos que aglutina son mas peque- ños, por sus celdillas mucho mas bicarinadas y sobre todo por el gran diente bifurcado de la boca, que falta en la otra. Es mui comun en la arena de la Guadalupe y de Santo Tomas: habita tambien en Cuba ; pero es rara. N° 115. QUINQUELOCULINA BIDENTATA. — (dOrb.) LAM. Хи, FIG. 18, 19 y 20. QUINQUELOCULINA. Testa ovato-angulosa, alba, rugosa, antice posticeque acuminata, margine bicarinata; loculis angulatis, irregulariter arcuatis , antice truncatis, postice dilatatis; dorso subicarinalo; apertura quadrilate- гай, bidentata. Dimensiones. Longilad................ Vaio. е. a millim. Concha oval, convexa, angulosa mui rugosa, obtusa por detras, un poco acuminada por delante, 35 170 FORAMINIFERAS. bicarinada en su contorno, con ángulos obtusos. Celdillas cuadrangulares, truncadas por delante, mui ensanchadas y obtusas por detras, con el dorso aplastado, anguloso por cada lado; suturas mui marcadas. Abertura cuadrangular, con bordes delgados, provista en su borde superior de un diente mui ancho, dividido desde la base por dos puntos salientes, 10 que representa como dos dien- tes. Color blanco lechoso uniforme. Mui vecina de la precedente por su forma general y por sus asperezas, no se distingue mas que por su abertura cuadrangular en vez de ser oval, con bordes lisos y no armada de dientes y por el diente superior ancho, doble y no sencillo y prolongado en su base. Creemos mui bien que sean dos especies distintas. Hemos do esta Quinqueloculina en las arenas de Cuba, traidas por el Sr. de la Sagra. Es mui rara. No 116. QUINQUELOCULINA POLYGONA. — (tOrb.) LAM. хп, FIG. 21, 22 y 23. QUINQUELOCULINA. Testa oblonga, convexa, multiangulata, leevigata, alba, antice angustata, postice obtusa, rotundata, margine bicarinata; loculis quadrilateralibus, flexuosis, antice angustato-truncatis, postice dilatatis; dorso canaliculato, bicarinato, carinis acutis, crenulatis; apertura minima, rotundata , unidentata. Dimensiones. Longilad.............. ео 1/, millim. Concha oval, oblonga, convexa, mui angulosa, lisa, brillante, estrecha y prolongada hácia ade- lante, obtusa y redondeada por detras, sumamente bicarinada en su contorno en ángulos agudos. Celdillas cuadriláteras, un poco flexuosas, adelgazadas, estrechas por delante, truncadas en sus extremidades, ensanchadas y obtusas por detras, con el dorso sumamente escavado , cuyos lados están adornados de quillas cortantes á manera de almenas, algunas veces mui salientes; suturas mui marcadas. Abertura pequeña, redonda, de bordes delgados, armada de un dientecito prolon- gado, sencillo, redondeado en su extremidad. Color blanco en todas partes. Esta especie por su doble quilla se aproxima а las tres que la preceden; pero se distingue рог su forma oblonga, por el surco profundo que se nota en el dorso de cada celdilla entre las qui- llas, por la grande salida de estas mismas quillas, por su superficie lisa y no rugosa, en fin, por su abertura del todo diferente. La salida de los ángulos de las celdillas cuando se la mira en globo la hace parecer como angulosa por todos lados, lo que nos ha determinado á darla el nombre de Polygona. Es rara en la arena de Cuba y un poco menos en la de la Jamaica, donde tambien la hemos descubierto. No 117. QUINQUELOCULINA CANDEIANA. — ( d'Orb.) LAM. Хп, а 24, 25 y 26. QuixQuELOCULINA. Testa ovato-oblonga, triangulari, alba, leevigata, nitida, antice acuminato-elongata, postice obtusa, margine carinata, cultrata; loculis FORAMINIFERAS. 171 flexuosis, triangularibus, antice prolongatis , truncatis , postice obtusis , dorso carinato-acutis; apertura rotunda, unidentata, dente brevi , simplici. Dimensiones. Longitud. .... 6 puntos. ...... 1 millim, en los individaos mayores. Concha oval, oblonga, triangular en su totalidad, lisa, brillante ó lijeramente marcada de algu- nas estrías longitudinales, prolongada en tubo hácia delante, obtusa por detras, con el contorno cortante. Celdallas triangulares, flexuosas en su longitud; estrechas, prolongadas y truncadas por delante, obtusas por el lado opuesto, con el dorso sumamente aquillado y cortante; suturas mui profundas. Color de un hermosísimo blanco de marfil. Vecina por su forma triangular y por su quilla de la QuixquELoCULINA longirostra, fosil de las capas subapeninas de Italia, se distingue por su quilla mas cortante, por sus celdillas mas sepa- radas, mas salientes, mas contorneadas, por su diente simple y no bifurcado. La hemos descubierto en la arena de la Jamaica, traida por M. Fernando de Candé, y en la de Cuba. Es mas rara en esta última isla. GÉNERO 10. ADELOSINA. — (POrb.) Concha libre, inequilátera en la edad adulta, angulosa, empezando por una gran celdilla compri- mida, suborbicular, provista de una prolongacion sobre la que vienen á colocarse celdillas ó un apelotonamiento en cinco caras opuestas. Celdillas de dos clases: la primera, circular y formando una vuelta completa, las otras no ocupando mas que la mitad de esta circunferencia y enroscándose con la edad de modo que solo resulten cinco aparentes; de cavidad sencilla. 4bertura armada de dientes como en las otras Agathistegas, y en la edad adulta alternativamente en una ú otra extre- midad del eje longitudinal. (Морёткѕ, n° 18, 1** livraison; по 97, 4° livraison.) Relaciones y diferencias. En la edad adulta no hai diferencia alguna entre las Adelosinas y las Quinqueloculinas, puesto que las dos tienen celdillas apelotonadas en cinco caras opuestas; pero esta edad adulta de las Adelosinas es rara y pocas especies llegan á ella, permaneciendo á lo mas en las dos primeras celdas. Las Adelosinas difieren de las Quinqueloculinas en que tienen dos distintas maneras de enroscamiento; en la juventud cada celdilla es espiral y da una vuelta com- pleta, igualmente aquillada, de una forma del todo regular y análoga á las Nautiloideas, despues abandonan este modo para componerse de dos celdillas por vuelta, apelotonadas en cinco caras. En las Quinqueloculinas el i en cinco caras existe en todas edades. Poseemos cuatro especies de este género, de las cuales dos son vivas del Adriático y dos fosiles de los terrenos terciarios de Castel-Arquato, en Italia. Es proa EXPLICACION DE LAS LAMINAS. LAMINA PRIMERA. OrBULINA universa, vista del lado de la abertura; aumentada 40 veces. Noposarra rugosa, d'Orb., vista de perfil; aumentada 20 veces. La misma, vista de frente por encima para mostrar la abertura; igual aumento. Nonosaria punctata, d'Orb., vista de perfil; aumentada 24 veces. La misma, vista de frente por encima para mostrar la abertura. Nonosarra Candei, VOrb., vista de perfil; aumentada 48 veces. La misma, vista por encima de la última celdilla. Мороѕлвта Catesbyi, d'Orb., vista de perfil; aumentada 75 veces. La misma, vista por encima de la última celdilla. La misma, parte del tubo de la última celdilla. OrTnocerIxa quadrilatera, d'Orb., vista de perfil; aumentada 72 veces. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. 1лхсоихА carinata, d'Orb., vista de perfil; aumentada 17 veces. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar la abertura de la hendidura. CoxuLixa conica, d'Orb., vista de perfil; aumentada 8 veces. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar sus numerosas aberturas. TexrtuLarra agglulinans, d'Orb., vista de perfil del lado de las suturas ; aumentada 27 veces. La misma, vista por encima de las últimas celdillas ; igualmente aumentada. TrexrtuLaria сопіса, d'Orb., vista de perfil del lado de la union de las celdillas; aumentada 46 veces. La misma, vista por encima de las dos últimas celdillas ; igual aumento. TexruLarra Sauleyana, d'Orb., vista de perfil del lado de la union de las celdillas; aumentada 104 veces. La misma, vista por encima de las últimas celdillas; igualmente aumentada. Sacrina pulchella, d'Orb., vista del lado de las celdillas; aumentada 50 veces. La misma, vista por encima de las últimas celdillas; igual aumento. TexruLaria Candeiana, d'Orb., vista del lado de la union de las celdillas; aumentada 24 veces. La misma, vista de perfil sobre el lomo de las celdillas. La misma, vista por encima de las últimas celdillas. TexruLaria Caribeo, d'Orb., vista de perfil del lado de la union de las celdillas; aumentada 99 veces. La misma, vista por encima de las últimas celdillas. AA MIOS FORAMINIFERAS. 173 VuLyuLINa gramen, d'Orb., vista de perfil del lado de la union de las celdillas; aumentada 78 veces. La misma, vista por encima de las últimas celdillas para mostrar la abertura. TExTULARIA agglutinans, d'Orb., vista de perfil del lado de la union de las celdillas; aumen- tada 27 veces. La misma, vista de perfil del lado del lomo de las celdillas. La misma, vista por encima de las últimas celdillas. Vincunixa punctata, d'Orb., vista de perfil del lado de la union de las celdillas; aumentada 102 veces. La misma, vista por encima de las últimas celdillas. TexruLarra cuneiformis, VOrb., vista de perfil del lado de la union de las celdillas ; aumen- tada 21 veces. La misma, vista de perfil del lado del lomo de las celdillas. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. LAMINA IL GurTuLIya vitrea, d'Orb., vista de perfil del lado combado ; aumentada 75 veces. La misma, vista de perfil del lado plano. La misma, vista por encima de las últimas celdillas para mostrar la abertura. GurruLixa pulchella, Orb., vista de perfil del lado combado ; aumentada 84 veces. La misma, vista de perfil del lado opuesto. La misma, vista por encima de las últimas celdillas para mostrar la abertura. GLoguLIÑA Caribæa, d'Orb., vista de perfil ; aumentada 100 veces. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. РогумокрніхА Rochefortiana, d'Orb., vista de perfil del lado de la union de las celdillas ; au- mentada 50 veces. La misma, vista de perfil del lado opuesto. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. PoLymorpuixa irregularis, d'Orb., vista de perfil; aumentada 44 veces. La misma, vista del lado opuesto. PoLymorrmiva rugosa, d'Orb., vista de perfil; aumentada 46 veces. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. CLAVULINA tricarinata, d'Orb., vista de perfil ; aumentada 22 veces. La misma, vista de perfil; mismo aumento. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. CLAvuLINA nodosaria, d'Orb, vista de perfil; aumentada 52 veces. La misma, vista por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. VaLvunina Oviedoana, d'Orb., vista de perfil del lado de la boca; aumentada 34 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. Uvicertsa 4uberiana, d'Orb., vista de perfil; aumentada 75 veces. La misma, vista por encima de las celdillas para mostrar la abertura ; igualmente aumentada. Burina affiinis, d'Orb., vista de perfil del lado de la abertura; aumentada 46 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. Слхрккл nitida, d'Orb., vista de perfil del lado de la última celdilla para mostrar las abertu- ras; aumentada 48 veces. La misma, vista por encima de la espira para mostrar las tres series de celdillas; aumentada igualmente. 36 174 FORAMINIFERAS. , Fig. 29. Вотлима dubia, d'Orb., vista por encima; aumentada 120 veces. 30. La misma, vista de perfil; igualmente aumentada. LAMINA II. RoraLixa dubia, d'Orb., vista por debajo; aumentada 120 veces. Ћотлыма bulloides, d'Orb., vista por encima; aumentada 75 veces. La misma, vista por debajo ; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil; aumentada igualmente. La misma, vista de perfil; igual aumento: figura tomada de otro egemplar menos alto. TruncaruLina Candei, d'Orb., vista por encima; aumentada 48 veces. La misma, vista por debajo ; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil; con igual aumento. RoraLixa rosea, d'Orb., vista por encima; aumentada 40 veces. La misma, vista por debajo; aumentada igualmente. 11. La misma, vista de perfil. 12. RosaLixa squamosa, d'Orb., vista por encima; aumentada 36 veces. 13. Га misma, vista por debajo; igualmente aumentada. 14. La misma, vista de perfil. 15. RosaLiva semistriata, d'Orb., vista por encima; aumentada 63 veces. 16. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. 17. La misma, vista de perfil; mismo aumento. 18. Воѕлілхл Poyei, d'Orb., vista por encima; aumentada 40 veces. 19. La misma, vista por debajo ; igualmente aumentada. 20. La misma, vista de perfil; igual aumento. 21. RosaLrxa valvulata, d'Orb., vista por encima; aumentada 42 veces. 22. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. 23. Га misma, vista de perfil; aumentada lo mismo. әд. RosaLixa opercularis, d'Orb., vista por encima; aumentada 66 veces. 25. La misma, vista de perfil; aumentada igualmente. Боюнряк рю = LAMINA IV. 1. Коѕлыма opercularis, d'Orb., vista por debajo; aumentada 66 veces. 2. RosaLina Candeiana, d'Orb., vista por encima; aumentada 48 veces. 3. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. A. La misma, vista de perfil ; aumento igual. 5. RosaLixa 4uberii, d'Orb., vista por encima; aumentada 69 veces. 6. Lamisma, vista por debajo; igualmente aumentada. 7. La misma, vista de perfil; con igual aumento. 8. La misma, parte de la testa, aumentada 207 veces para mostrar los poros exteriores de las celdillas. 9. RoraLixa deformis, d'Orb., vista por encima; aumentada 24 veces. 10. Га misma, vista por debajo ; igualmente aumentada. 11. La misma, vista de perfil sobre un individuo aun no disforme ; aumentada 48 veces. CSS AS Ф № © $ FORAMINIFERAS. 175 GLOBIGERINA rubra, d'Orb., vista por encima mostrando en 6 las aberturas anómalas; figura aumentada 48 veces. La misma, vista por encima; igualmente aumentada: a, abertura normal. La misma, vista de perfil; aumentada igualmente : a, abertura normal. GLOBIGERINA siphonifera, d'Orb., vista por encima; aumentada 62 veces. La misma, vista por debajo; aumentada 69 veces. La misma, vista de perfil ; igualmente aumentada. La misma, parte aumentada 207 veces para mostrar los tubitos de que está cubierta la concha. GLor1cERINA Dutertrei, d'Orb., vista por encima ; aumentada 46 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil. Rosana Catesbyana, d'Orb., vista por encima; aumentada 66 veces. La misma, vista por debajo; aumentada igualmente. La misma, vista de perfil del lado de la abertura. Коѕлымл Parkinsoniana, d'Orb., vista por encima; aumentada 66 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil del lado de la abertura. LAMINA V. RortaLiva Caribæa, d'Orb., vista por encima; aumentada 47 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil del lado de la abertura a. RoraLiva Antillarum, d'Orb., vista por encima; aumentada 48 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil del lado de la abertura. RoraLiya cultrata, d'Orb., vista por encima; aumentada 69 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil del lado de la abertura. Rosarixa Linneiana, d'Orb., vista por encima; aumentada 82 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil; amentada lo mismo. Котлымл Sagra, d'Orb., vista por encima; aumentada 92 veces. La misma, vista por debajo ; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil. CaLcartya pulchella, d'Orb., vista por encima; aumentada 80 veces. La misma, vista por debajo; aumentada igualmente. La misma, vista de perfil del lado de la abertura. ASTERIGERINA lobata, d'Orb., vista por encima; aumentada 50 veces. La misma, vista por debajo ; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil encima de la última celdilla para mostrar la abertura. CALCARINA calcar, d'Orb., vista por encima; aumentada 13 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil ; igual aumento. ASTERIGERINA carinata, d'Orb., vista por debajo; aumentada 46 veces. 176 Fig. 18. FORAMINIFERAS. LAMINA VL ASTERIGERINA carinata, d'Orb., vista por encima; aumentada 46 veces. La misma, vista de perfil; igualmente aumentada. ТдохсАтомхА advena, d'Orb., vista por encima del lado por donde se fija; aumentada 46 veces. La misma, vista por debajo por el lado fijo ; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil para mostrar la abertura. Nontonixa Gradeloupi, d'Orb., vista de lado; aumentada 70 veces. La misma, vista de perfil del lado de la última celdilla. Rosanma Edwardsiana, d'Orb., vista por encima; aumentada 69 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil para mostrar la abertura. PraxorpuLIÑA vulgaris, d'Orb., vista por encima; aumentada 8 veces : variedad regular. La misma, vista por encima del lado fijo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil por el lado fijo; igual aumento. La misma, vista por encima; variedad irregular. La misma, una celda aumentada 48 veces para mostrar los poros de que está atravesada. Орексоима incerta, d'Orb., vista de lado; aumentada 200 veces. La, misma, vista de perfil para mostrar su poco espesor. NontoNIÑA Sloanii, d'Orb., vista de lado; aumentada 84 veces. 18 bis. La misma, vista de perfil encima de la última celdilla ; igualmente aumentada. 19. 20. 21. PoLysromíLLA Sagra, d'Orb., vista de lado; aumentada 66 veces. La misma, vista de perfil encima de la última celdilla para mostrar las aberturas. Pexeropris dubius, d'Orb., vista de lado; aumentada 148 veces. La misma, vista de perfil encima de la última celdilla para mostrar las aberturas. PorystomeLLA discoidalis, d'Orb., vista de lado ; aumentada 80 veces. La misma, vista de perfil encima de la última celdilla. PoLysromeLLA Poeyana, d'Orb., vista de lado; aumentada 63 veces. La misma, vista de perfil encima de la última celdilla para mostrar las aberturas. LAMINA ҮП. Peneroris elegans, d'Orb., vista de lado ; aumentada 66 veces. La misma, vista de perfil por encima de la última celdilla para ver las aberturas. Dexbxrriva 4ntillarum, d'Orb., variedad disforme : vista de lado; aumentada 44 veces. La. misma, vista de perfil por encima de la última celdilla para ver las aberturas. La misma, individuo de forma normal, vista de lado; aumentada 44 veces. La misma, vista de perfil por encima de la última celdilla para ver las aberturas. PexeropLis proteus, d'Orb., variedad de celdillas dilatadas, vista de lado y aumentada 22 veces. La misma, variedad vista de perfil por encima de la última celdilla para mostrar las aber- turas. La misma, variedad espirolina, vista de lado ; aumentada 30 veces. La misma, variedad de celdillas separadas y ensanchadas, vista de lado; aumentada 22 veces. La misma (individuo jóven en su forma ordinaria), vista de lado; aumentada 66 veces. FORAMINIFERAS. 177 PoLysromeLLA Lanieri, d'Orb., vista de lado; aumentada 44 veces. La misma, vista de perfil por encima de la última celdilla para mostrar las aberturas. VERTEBRALINA cassis, d'Orb., vista de lado; aumentada 44 veces. La misma, vista de perfil para mostrar la abertura; igualmente aumentada. VERTEBRALINA mucronata, d'Orb., adulta, vista de lado ; aumentada 42 veces. La misma, vista de perfil por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. La misma, individuo jóven, vista de lado; aumentada 84 veces. La misma, vista de perfil por encima de la última celdilla para mostrar la abertura. CristeLLaria gibba, d'Orb., vista de lado; aumentada 44 veces. La misma, vista de perfil por encima de última celdilla; igual aumento. М№омомхл Brownii, d'Orb., vista de lado; aumentada 88 veces. La misma, vista de perfil por encima de la última celdilla : igualmente aumentada. Murerosrecixa Ántillarum, d'Orb., vista de lado; aumentada 11 veces. ta de perfil; igualmente aumentada. La misma, у! LAMINA ҮШ. AmpnistEGINA gibbosa, d'Orb., vista por encima; aumentada 48 veces. La misma, vista por debajo; igualmente aumentada. La misma, vista de perfil; con igual aumento. OnsicuLiya compressa, d'Orb., individuo mui viejo, vista de lado; 11 veces aumentada. La misma, individuo no tan viejo, vista de lado; aumentada 20 veces. La misma, el mismo individuo; vista de perfil para mostrar las aberturas. La misma, individuo mui jóven, antes que las celdas den vueltas ; aumentada 70 veces. OnsicuLixa adunca, Lamarck, mui jóven, vista de lado ; aumentada 44 veces. La misma, vista de perfil por encima de la última celdilla para mostrar las aberturas. La misma, individuo adulto, variedad dilatada; aumentada 10 veces. La misma, individuo adulto, variedad dilatada; aumentada 10 veces. La misma, individuo adulto, variedad dilatada y separada; aumentada 10 veces. La misma, individuo con celda separada y dilatada ; aumentada 25 veces. La misma, individuo de forma ordinaria; aumentada 15 veces. La misma, parte exterior de las celdillas, aumentada 60 veces, para mostrar la contextura. La misma, parte interior de las celdillas para mostrar sus divisiones ; aumentada 60 veces. CristeLLaRIa crepidula, V'Orb., vista de lado ; aumentada 66 veces. La misma, vista de perfil por encima de la última celdilla. ALVEOLINA pulchra, d'Orb., vista de lado; aumentada 132 veces. La misma, vista de perfil del lado de la última celdilla para mostrar las aberturas. BiocuLixa oblonga, d'Orb., vista por encima; aumentada 66 veces. La misma, vista de perfil, de lado, para mostrar la boca. La misma, vista de frente, por encima, para mostrar la abertura y su diente. BuocuLixa carinata, d'Orb., vista por encima; aumentada 33 veces. BiLocuLixa subspherica, d'Orb., vista por encima ; aumentada 66 veces. La misma, vista de perfil para mostrar el saliente del diente. La misma, vista acortada para mostrar la forma de la abertura y del diente. FORAMINIFERAS. LAMINA IX. BiLocuLina carinata, d'Orb., vista de lado para mostrar su espesor. La misma, vista acortada del lado de la boca. SPIROLOCULINA Ántillarum, d'Orb., vista de lado; aumentada 36 veces. La misma, vista acortada para mostrar la forma de la abertura. TriLocuniva Gualtieriana, d'Orb., vista de lado; aumentada 44 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la abertura y su diente. Tru.ocunixa Fichtelliana, d'Orb., vista de lado; aumentada 132 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada del lado de la abertura. TniLocuLiva Linneana, d'Orb., vista de lado; aumentada 69 veces. La misma, vista del otro lado. La misma, vista acortada para mostrar la forma de la boca. TriLocuLixa quadrilatera, d'Orb., vista de lado; aumentada 69 veces. La misma, vista del otro lado. La misma, vista acortada para mostrar la abertura y la forma del diente. TriLocuLiva Planciana, d'Orb., vista de lado; aumentada 66 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista recortada para mostrar la forma de las celdillas y de la abertura. TriLocuLINA Schreiberiana, d'Orb., vista de lado; aumentada 115 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma de la abertura. Arricurina Sagra, d'Orb., vista de perfil, adulta ; aumentada 72 veces. La misma, mas jóven, vista de perfil; aumentada 86 veces. La misma, vista det lado opuesto. La misma, vista acortada del lado de la abertura. LAMINA X. SpIROLOGULINA Poeyiana, d'Orb., vista de lado; aumentada 39 veces. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas. TnimocuLina oblonga, d'Orb., vista de lado; aumentada 50 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la abertura. TriocuLrva Brongniartiana, d'Orb., vista de lado; aumentada 44 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la abertura. TniLocuLIxa suborbicularis, d'Orb., vista de lado; aumentada 125 veces. La misma, vista del lado opuesto. ў La misma, vista acortada para mostrar la abertura. TriLocuLina labiosa, VOrb., vista de lado; aumentada 110 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma y la abertura del diente. FORAMINIFERAS. 179 TniLocuLIÑa carinata, d'Orb., vista de lado ; aumentada 44 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma de la boca y del diente. Ткп.осшлхх bicarinata, d'Orb., vista de un lado; aumentada 66 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la abertura y el diente. TriLocuLina eburnea, d'Orb., vista de lado; aumentada 88 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma del diente y de la abertura. QuineurLocuLina Planciana, d'Orb., vista por debajo; aumentada 75veces La misma, vista de perfil del lado de la boca. LAMINA ХІ. QuisgueLocuniva Gualtieriana, d'Orb., vista de lado; aumentada 17 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada del lado de la abertura para mostrar la forma del diente. QuixoueLocuLIÑNA Planciana, d'Orb., vista de lado ; aumentada 28 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas, de la abertura y del diente. QUINQUELOCULINA tricarinata, d'Orb., vista de lado ; aumentada 23 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas y de la abertura. TriLocuLixa gracilis, d'Orb., vista de lado; aumentada 88 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas y de la abertura. QUINQUELOCULINA tricarinata, d'Orb., boca aumentada 115 veces para mostrar la forma del diente. QuivouzLocuLiya Lamarckiana, d'Orb., vista de lado; aumentada 33 veces. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas, de la abertura y del diente. QursqueLocuLva Sagra, d'Orb., vista de lado ; aumentada 44 veces. La misma, vista del lado opuesto mostrando las escavaciones de que está cubierta. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas, de la abertura y del diente. QuixqueLocULIÑA Cuvieriana, @'ОгЬ, vista de perfil; aumentada 40 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas, de la abertura у del diente de ésta. QuINQUELOCULINA Bosciana, d'Orb., vista de lado; aumentada 75 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. La misma, vista acortada del lado de la abertura. (UINQUELOCULINA Poeyiana, d'Orb., vista de lado; aumentada 69 veces. , La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas, de la abertura y del diente. QUINQUELOCULINA dilatata, d'Orb., vista de lado; aumentada 69 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas y de la abertura. 180 FORAMINIFERAS. LAM QuixoueLocuLIÑA 4uberiana, d'Orb., vista de lado; aumentada 44 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. La misma, vista aumentada para mostrar la forma de las celdillas, de la abertura y del diente. QuINQUELOCULINA 4ntillarum, d'Orb., vista de lado; aumentada 15 veces. La misma, vista del lado opuesto, de un individuo mui viejo y menos regular. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas, de la abertura y del diente. SpiroLocuLva ornata, d'Orb., vista de lado. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas. QuIxquELoCULIvA bicostata, d'Orb., vista de lado; aumentada 44 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas y de la abertura. QuioueLocuriya agglutinans, d'Orb., vista de lado; aumentada 24 veces. La misma, vista del lado opuesto mostrando los granos de arena que se le han pegado. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas y de la abertura. QUINQUELOCULINA enoplostoma, d'Orb., vista de lado; aumentada 15 veces. La misma, vista del lado opuesto mostrando los granos de arena aglutinados. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas y de la boca. La misma, la boca vista de frente, aumentada 50 veces, para mostrar los dientes de que está adornada. QuixqueLocuLINA bidentata, d'Orb., vista de lado; aumentada 16 veces. La misma, vista del lado opuesto. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas, de la abertura y del diente de esta última. (QuINQUELOCULINA polygona, d'Orb., vista de lado; aumentada 48 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdillas y de la abertura. QuixqueLocuLina Candeiana, d'Orb., vista de lado ; aumentada 21 veces. La misma, vista del lado opuesto; igualmente aumentada. La misma, vista acortada para mostrar la forma de las celdilla y de la abertura. FIN DE LAS FORAMINIFERAS,