Skip to main content

Full text of "Colección de documentos inéditos papa la historia de España"

See other formats


■y^' 


:CJ) 


:cc 


■CDl 


«Í'ÍP: 


00 1 


yfii\\r  ■fc^'* 


r«^í 


QjD¿/>/fo/cCi 


a 


ae^^'o/i  ^  ^Á.  L  (7/tov(7.>  c\V  L^  íKi/{//o 


/,-  //- 


n 


COLECCIÓN 

DE  DOCUMENTOS  ÜDITOS 

PARA  LA  HISTORIA  DE  ESPAÑA. 


I 


COLECCIOIV 


DE 


PARA 


LA  HISTORIA  DE  ESPAÑA, 


POR 


Individuos  de  la  Academia  de  la  Historia. 


TOMO  XXX. 


l¡> 


MADRID. 

IMPRENTA  DF.  H   VIUDA  IIE  CALERO, 


WIIN*I1   #1 


m. 


DV 

3 

ai 

tso 


}    ' 


COMIXI'ACION  DE  LA  CORRESPONDENCIA 


FELIPE  II 

CON 

DON  GARCÍA  DE  TOLEDO  Y  OTROS, 

de  los  aúos  loOS  y  loGO,  sobre  los  proparativos  terrestres  y  marí- 
timos para  deíeüder  la  Goleta,  Malta  y  otros  pmitos  contra 
la  armada  del  turco. 

(Sacada  de  Simancas  y  del  archivo  del  Excrao.  Sr.  diKiue  de 
Mcdinasidüüia. ) 

Copia  de  carta  de  S.  M.  al  duque  de  Francavila.  Madrid 
5  de  noviembre  de  1565. 

Construcción  de  40  buques. 

(Archivo  del  Exorno.  Sr.  duque  de  Mcdiimsidonia.) 

El  Rcy  : 

Illc.  duque  de  Francavila,  nuestro  visorey,  lugarteniente 
y  capitán  general  del  Principado  de  Cataluña:  Las  cartas  que 
me  habéis  escriplo  con  los  últimos  correos  que  han  venido  de 
Italia  he  rescibido,  y  con  tan  buenas  nuevas  como  han  traido, 
soy  cierto  habréis  tenido  todo  contentamiento,  y  os  agradezco 
lo  que  cerca  dcslo  decís,  y  placerá  á  Nuestro  Señor  que  don 


García,  que  fué  en  seguimiento  de  la  armada  del  turco,  habrá 
hecho  algún  buen  efecto. 

Y  porque  importa  mucho  prevenir  las  cosas  de  la  mar 
con  tiempo  para  lo  que  el  año  que  viene  se  podria  ofrescer, 
os  torno  de  nuevo  á  encargar  hagáis  mucha  diligencia  á  la 
fábrica  de  los  40  buques  que  os  habernos  escriplo ,  y  nos 
aviséis  del  estado  en  que  los  tenéis,  que  con  brevedad  se  os 
proveerá  de  mas  dinero. 

En  cuenta  de  los  20  buques  que  escribimos  al  visorey 
de  Ñapóles  hiciese  hacer  en  aquel  reino ,  he  proveído  que  se 
labren  en  Genova  seis ;  y  porque  el  embajador  Figueroa  es- 
cribe que  allí  hay  falta  de  tablas  para  fajar ,  y  que  seria  bien 
se  llevasen  dése  Principado  por  haber  abundancia  dellas ,  os 
encargo  que  no  haciendo  falla  á  los  que  ahí  se  labran  y  han 
de  labrar ,  deis  orden  que  se  le  envíen  las  que  para  este  efecto 
fuesen  menester  con  la  primera  ocasión  que  se  ofrezca,  y  que 
con  este  correo  aviséis  al  dicho  embajador  de  la  resolución 
que  tomáredes ,  porque  no  pierda  tiempo  en  lo  que  hubiere 
de  hacer. 

En  lo  del  dinero  que  pedís ,  demás  de  lo  que  estos  días 
pasados  se  os  ha  enviado ,  se  mirará  lo  que  se  podria  hacer, 
y  será  bien  que  enviéis  relación  de  lo  que  se  quedaba  de^- 
biendo  á  la  gente  de  guerra  después  de  habérseles  hecho  estas 
últimas  pagas,  y  lo  que  será  menester  para  las  otras.  De 
Madrid  á  5  de  noviembre  1565. 


Carla  aulógrofa  de  Gonzalo  Pérez  á  D.  Garda  de  Toledo. 
Madrid  6  de  noviembre  de  1565. 

Se  alegra  de  que  haya  llegado  de  levante  á  Mesina  con  todas 
las  galeras— Ida  del  Rey  á  Toledo  para  entrar  con  el  cuerpo  de 
San  Eugenio. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medtnastdonia. ) 

Illmo.  y  Exmo.  Señor  : 

No  tengo  carta  de  V.  Ex.""  á  que  deba  respuesta.  Por 
otras  he  entendido  el  buen  suceso  de  Malta ,  y  como  fué 
V.  Ex.*  al  Cerigo  á  esperar  el  armada,  y  como  era  vuelto  á 
Mesina  á  los  siete  del  pasado  á  salvamento  con  todas  las  ga- 
leras, de  que  he  holgado  cuanto  es  razón,  y  espero  en  Nues- 
tro Señor  que  con  tan  gran  principio  se  dará  fin  á  otro  año 
á  la  armada  del  turco.  Y  V.  Ex.*  hará  este  servicio  á  Dios 
y  á  su  rey  y  beneficio  de  la  cristiandad :  él  lo  haga  como 
puede.  De  acá  no  hay  cosa  de  nuevo  que  scribir  á  V.  Ex.' 
S.  M.  y  la  reina  y  el  príncipe  han  venido  buenos  de  Segovia 
y  así  lo  están  agora.  El  rey  se  partirá  para  Toledo  de  aquí  á 
ocho  dias  para  entrar  con  el  cuerpo  de  señor  Sant  Eugenio, 
que  se  ha  traído  de  Francia  y  se  traslada  á  la  iglesia  mayor 
de  Toledo. 

El  alférez  Guevara  ha  venido  aquí  con  licencia  de  V.  Ex.* 
y  tiene  una  libranza  de  su  dinero,  que  V.  Ex.*  le  mandó  ha- 
cer y  no  se  puede  sostener  aquí  sin  ellos.  Suplico  á  V.  Ex.' 
se  los  mande  pagar ,  que  este  correo  lleva  cargo  de  solicita- 
Uo  y  será  para  mí  muy  grande  merced. 

También  suplico  á  V.  Ex.'  haga  merced  á  D.  Guillen  de 


Rocafull  para  que  se  venga  á  invernar  acá  con  sus  galeras, 
porque  tiene  grandísima  necesidad  dello. 

Al  duque  de  Vivona  deseo  mucho  servir ,  por  ser  yerno 
del  duque  de  Medinaceli.  Suplico  á  V.  Ex.'  le  mande  favo- 
rescer  y  tener  por  muy  encomendado  en  sus  cosas.  Y  per- 
done estas  importunidades,  que  como  me  tienen  por  tan  ser- 
vidor de  V.  Ex. ^  no  las  puedo  excusar;  cuya  lima,  persona 
y  estado  Nuestro  Señor  guarde  y  prospere.  De  Madrid  á  vi 
de  noviembre  1565. — Besa  las  manos  de  V.  Ex.'  su  mayor 
servidor. — G.°  Pérez. 

Sobre. — Al  Illmo.  y  Exmo.  señor  mi  señor  D.  García  de 
Toledo,  capitán  general  de  la  mar, — En  Mesina, 


Carta  original  del  secretario  Francisco  de  Eraso  á  D.  Gar- 
cía  de  l'oledo.  Madrid  6  de  noviembre  de  1565. 

Se  alegra  del  buen  suceso  de  Malta  y  de  que  S.  M.  haya  esti- 
mado este  servicio  en  lo  que  era  razón. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  dwiue  de  Medinasidonia.) 
Muy  Ille.  Señor: 

Aunque  con  el  subceso  que  ha  tenido  lo  de  Malta  hemos 
holgado  todos  grandemente ,  me  ha  cabido  á  mí  tanta  parle 
del  afán  y  grita  de  que  V.  S.  ha  librado  á  sí  y  á  otros  que 
no  puedo  dejar  de  alegrarme  de  nuevo  con  V.  S.  y  darle  la 
norabuena  de  la  victoria  que  se  hubiera  mal  conseguido  sin 
su  cordura  y  diligencia ,  la  cual  no  se  podrá  conocer  por  los 
que  hablaban  sin  tener  ninguna  destas  partes  y  menos  ex- 
periencia. Ha  eslimado  S.  M.  este  servicio  tan  particular  que 


9 

V.  S.  le  ha  hecho  en  lo  ques  razón ,  y  queda  cl  mas  contenió 
hombre  del  mundo.  Y  acaba  hoy  de  entender  por  cartas  del 
embajador  de  Genova,  que  V.  S.  ha  vuelto  con  todas  las  ga- 
leras á  siete  del  pasado  á  Mesina  muy  trabajado  de  las  bor- 
rascas y  tormenta  que  tuvo  después  que  fué  en  seguimiento 
de  la  armada  sin  haberla  podido  encontrar.  Placerá  á  Dios 
dar  vida  á  V.  S.  para  que  lo  haga  algún  dia,  de  suerte  que 
paguen  nuestros  enemigos  la  deuda  por  junto. 

He  sentido  en  el  alma  la  muerte  del  señor  García ,  aun- 
que para  creer  está  en  el  cielo  es  gran  consuelo  hiciese  tan 
buen  fin ;  y  no  habrá  para  que  dar  á  V.  S.  palabras  de  con- 
suelo pues  tan  bien  lo  entiende  todo,  ni  para  que  ser  largo 
en  esta,  satisfaciendo  S.  M.  á  V.  S.  en  lo  que  toca  á  nego- 
cios tan  cumplidamente,  sino  remitirme  á  su  carta.  Y  las  que 
V.  S.  habia  enviado  á  pedir  para  Francisco  Colona  y  Paulo 
Santaflor  van  con  esta  despachadas ,  y  las  copias  dellas  y  de 
los  demás  despachos  que  este  correo  lleva  para  el  duque  de 
Alcalá  y  los  otros  ministros,  porque  V.  S.  tenga  mejor  en- 
tendido lo  que  en  todo  provee  y  ordena  S.  M.,  el  cual  queda 
bueno,  bendito  Nuestro  Señor,  y  asi  el  príncipe  nuestro  señor 
y  las  demás  personas  reales.  Y  yo  me  hallo  ahora  con  salud, 
aunque  muchos  dias  atrás  he  estado  falto  della.  Guarde  y 
acresciente  Nuestro  Señor  la  muy  Ule.  persona  y  estado  de 
V.  S.  como  desea.  Madrid  6  de  noviembre  1565. 

De  puño  propio. 

No  puedo  encarescer  cl  alegría  y  contentamiento  que  me 
ha  dado  este  servicio  tan  señalado  que  V.  S.  ha  hecho  á  Dios, 
á  S.  M.  y  á  la  cristiandad,  y  especialmente  á  los  estados  de 
S.  M.  Plega  á  Dios  goardar  á  V.  S.  para  que  haga  otros  mu- 
chos. Yo  he  acordado  á  S.  ^I.  la  razón  que  hay  para  enviar 


10 

á  V.  S.  lo  que  puede  pretender  y  hace  esperar  á  que  venga 
correo  de  V.  S.  Yo  siempre  le  tengo  de  servir,  no  por  el  afi- 
ción y  amistad  que  tengo  á  V.  S.,  sino  por  lo  que  ha  hecho 
en  honor  y  reputación  suya. 

Besa  las  manos  á  V.  S.  su  servidor ,  Francisco  de  Eraso. 

De  otra  letra. 

Ahí  va  una  carta  abierta  de  S.  M.  para  que  mande  pa- 
gar al  contador  Orozco  y  los  otros  dos  comisarios  que  han  ido 
de  acá  con  la  infantería  spañola  sus  sueldos.  V.  S.  mandará 
dar  orden  que  sean  satisfechos,  y  yo  les  escribo  que  acudan 
á  V.  S.  sobrello. 

Sobre. — Al  muy  Ule.  señor  mi  señor  D.  García  de  Tole- 
do, capitán  general  y  visorey  de  Sicilia. 


Carta  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M.,  fecha  en 
Mesina  á  26  (1)  de  noviembre  de  1565. 

Sobre  las  fortificaciones  de  Malta  y  de  la  Goleta— Rumores  de 
que  el  gran  maestre  quería  pasarse  á  Zaragoza  de  Sicilia. 

{Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1129^ 

S.  G.  R.  M. 

Yo  estoy  con  cuidado  de  ver  que  dende  los  once  de  se- 
tiembre que  partió  el  armada  de  sobre  Malta  hasta  hoy  no 
se  haya  puesto  una  piedra  ni  dado  un  golpe  de  pico  en  el  re- 
paro y  fortificación  de  aquella  isla  y  pasada  en  San  Telmo, 

(1)  En  la  cárpela  dice  27. 


H 

y  si  no  importase  lo  que  importa  el  dejar  pasar  el  tiempo, 
podríase  bien  aguardar  lo  que  el  maestre  dice,  que  es  haber 
enviado  á  dar  cuenta  á  V.  M.  y  á  otros  príncipes  del  estado 
en  que  está  la  religión  por  falta  de  fuerzas  para  repararse  y 
defenderse.  Pero  no  pudiendo  venir  esta  respuesta  sino  casi 
á  la  meitad  del  invierno ,  aunque  sea  conforme  á  lo  que  el 
maestre  desea ,  dejando  pasar  estos  meses  no  le  bastarán  los 
que  quedan  para  fortificarse  de  la  manera  que  convernía 
para  defenderse  de  la  armada  del  turco  si  sobre  la  isla  tor- 
nase este  verano,  y  tengo  por  mucho  por  esta  inresolucion, 
que  si  se  hubiese  determinado  desde  el  primer  dia  de  salirse 
de  allí ,  porque  en  tal  caso  por  la  defensa  y  guardia  deste 
reino  ó  reinos  de  V.  M.  hubiérame  yo  determinado  de  ir  allí 
y  poner  mano  en  la  labor  y  tomar  la  defensa  de  aquella  en 
nombre  de  V.  M.,  tomando  el  sitio  que  mas  conveniente  me 
paresciera  para  guardar  aquellos  puertos  y  asegurar  lo  de 
acá,  y  estando  en  estas  inresoluciones,  como  digo,  ni  se  hace 
lo  uno  ni  puedo  dejar  de  temer  lo  otro.  Yo  me  podria  enga- 
ñar; pero  creo  que  el  turco  sufrirá  de  mala  gana  como  hom- 
bre no  avezado  á  pérdidas  el  daño  y  vergüenza  que  este  ve- 
rano pasado  ha  rescibido ,  y  creo  cierto  que  este  que  viene 
lo  querrá  remediar,  y  sabiendo  como  sabrá  que  tal  quedó 
Malta,  y  el  tiempo  que  se  pierde  en  repararla,  conoscerá  ser 
fácil  el  haberla  á  las  manos.  Yo  he  escrito  al  maestre  solici- 
tándole que  no  pierda  tiempo  en  fortificarse ,  como  V.  M. 
verá  por  la  copia  de  la  carta  que  va  con  esta.  Ternía  por 
bien  que  V.  M.  mandase  responder  luego  á  sus  despachos, 
porque  no  tenga  excusa  que  con  esperar  respuesta  se  le  ha 
pasado  el  tiempo. 

Temóme  que  esta  inresolucion  del  maestre,  aunque  me 
dijo  todo  lo  contrario  cuando  últimamente  estuve  en  Malla, 
no  nazca  de  poca  voluntad  de  estar  á  donde  está  viéndolo 


!2 

mal  parado,  y  el  perder  tiempo  en  no  comenzar  obra  tan  ne- 
cesaria que  no  sea  para  tomarlo  por  excusa ,  diciendo  que 
la  respuesta  viene  tarde  y  que  ya  no  le  quedan  dias  para  po- 
derse fortiíicar,  porque  estando  escarmentado,  si  no  pensase 
esto,  ya  habriade  tener  liecha  una  parte  de  la  fortificación; 
y  pues  le  importa  la  vida  y  el  ser,  no  es  de  creer  que  se  des- 
cuidarla como  lo  hace  si  no  tuviese  este  pensamiento;  el  cual 
es  dañosísimo  al  servicio  de  V.  M.  por  las  causas  que  tengo 
dichas ,  y  aunque  la  religión  esté  pobre  no  hablan  de  faltar 
veinte  ó  treinta  mil  escudos  para  este  principio  tan  necesa- 
rio, tanto  mas  que  paresciéndome  que  cumplía  al  servicio 
de  V.  M.,  le  he  ofrecido  yo  una  buena  parte  dellos  de  mi  ha- 
cienda. V.  M.  siendo  servido  mande  hacer  en  ello  la  provi- 
sión que  mas  le  pareciere  convenir  á  su  servicio ,  y  para  en 
cualquier  caso  que  suceda  será  menester  que  V.  M.  tenga 
mandado  en  los  estados  y  reinos  que  en  Italia  tiene  que  se 
me  dé  toda  la  infantería  ordinaria  que  en  ellos  hay,  sin  que 
sea  necesario  esperar  consultas  de  V.  M.,  pues  está  claro  que 
habiendo  tanta  distancia  de  camino,  será  ya  pasado  el  tiem- 
po de  los  remedios  cuando  la  respuesta  viniere.  Uno  de  los 
que  yo  veo  en  caso  que  la  armada  viniese  sobre  Malta  es  su- 
plir con  grueso  número  de  gente  lo  que  faltare  de  murallas 
y  fosos ,  y  este  juicio  será  según  estuviere  la  fortificación 
atrás  ó  adelante,  y  para  esto  y  otras  muchas  cosas  conviene 
que  el  que  aquí  estuviere  en  el  cargo  que  yo  tengo ,  tenga 
la  mano  larga  para  alcanzar  á  todas  pai'tcs ;  y  certifico  á 
V.  M.  que  si  con  mi  propiedad,  trabajos  y  voluntad  tuviese 
cuenta  que  cuanto  mas  corta  fuese ,  tanto  mayor  satisfacción 
y  contentamiento  seria  para  mí.  Pero  esto  digo  por  el  puro 
servicio  de  V.  M. 

He  entendido  que  el  maestre  platicaba  en  Malta  de  pa- 
sarse en  Zaragoza,  y  aunque  creo  que  V.  M.  considerará  bien 


esto,  lotlavía  me  ha  parescido  ailvcrlir  á  V.  M.  que  no  es 
plaza  Zaragoza  para  dejar  habitar  un  francés  en  ella,  cuan- 
to mas  tantos,  y  esto  importa  mas  de  lo  que  yo  podría  decir 
ni  encarescer,  ni  puede  haber  otra  seguridad  en  esto,  sino 
no  consentirlo  por  ningún  caso. 

También  me  parece  que  conviene  y  mucho  pensar  qué* 
forma  de  defensa  ha  de  tener  la  Goleta,  y  proveerlo  y  man- 
darlo luego ,  para  que  en  caso  que  se  tenga  nueva  cierta  de 
la  venida  de  la  armada  se  pueda  ejecutar ,  y  á  la  balería  que 
he  visto  que  han  dado  á  Malta,  conozco  que  no  tiene  la  Go- 
leta resistencia  de  veinte  dias,  cuanto  masque  allí  habrá 
menos  dificultades  por  las  grandes  comodidades  que  tendrán 
del  rey  de  Túnez ,  y  creo  cierto  que  el  mejor  remedio  para  la 
Goleta  seria  echar  de  allí  aquel  rey  y  hacer  una  fuerza  en 
aquella  ciudad  á  la  parte  del  estaño  para  que  se  respondiese 
con  la  Goleta,  y  que  no  hubiese  otro  rey  sino  V.  M.,  y  es- 
lando  con  los  moros  de  paz  y  manteniéndolos  en  justicia  creo 
que  dellos  se  sacaría  lo  que  importase  el  gasto  de  todas  dos 
fuerzas;  pero  este  es  remedio  mas  largo  de  lo  que  sufre  la 
necesidad  desle  verano  si  la  hubiere  en  él.  Si  la  fuerza  fuese 
grande,  seria  del  mismo  parescer  que  soy  en  lo  de  Malta; 
pero  ni  la  fuerza  es  capaz  para  ello,  ni  tendrían  el  agua  que 
seria  menester.  Y  en  lo  del  designo  del  año  pasado  de  me- 
terle ocho  ó  diez  mil  hombres  á  los  pozos ,  hállelo  mas  difi- 
cultoso de  lo  que  paresce  y  á  peligro  manifiesto  de  perder 
toda  la  gente  que  en  tal  sitio  se  pusiese.  Y  agora  envío  allí 
diez  mil  hanegas  de  trigo  y  tres  mil  y  quinientas  de  cebada, 
y  envíase  á  saber  el  número  de  gente  que  hay  allí  para  gas- 
tar estas  vituallas,  porque  habiendo  enviado  el  otro  día  bue- 
na cantidad,  me  escribió  D.  Alonso  Pimentel  que  ya  no  tenia 
trigo  ni  cebada. 

Scriplo  he  á  V.  M.  que  para  en  cualquier  caso  conviene 


14 

(lar  priesa  en  las  galeras  que  de  nuevo  se  hacen,  porque  lal 
ocasión  podría  suceder  que  fuese  el  verdadero  remedio  de 
lodo  tenerlas  en  perfección.  Ha  de  mandar  V.  M.  siendo  ser- 
vido que  se  tengan  alistados  en  las  tierras  de  marina  del 
reino  de  Ñapóles,  sirviéndose  también  de  las  de  la  montaña 
que  estuvieren  mas  cerca  dellas,  hasta  seis  ó  siete  mil  hom- 
bres del  remo,  y  en  este  reino  procuraré  de  alistar  otros  tres 
mil ,  para  en  caso  que  fuese  menester  que  sepa  á  donde  acu- 
dir con  tiempo,  porque  hasta  que  V.  M.  tenga  armadas  las 
galeras  de  la  suerte  que  di  á  V.  M.  por  escrito  cuando  en 
Barcelona  me  envió  á  mandar  que  dijese  mi  parescer ,  no 
veo  yo  otro  remedio  mas  á  la  mano  del  que  digo;  y  para  que 
aquel  expidiente  que  es  mejor  y  de  menos  gasto  se  pueda  eje- 
cutar, debe  V.  M.  mandar  hacer  mayor  diligencia  de  la  que 
se  hace  en  sus  estados  y  reinos  en  haber  forzados  y  esclavos. 
Para  este  alistar  desta  gente  que  digo  conviene  que  esté  acá 
la  orden,  pero  que  no  se  publique  hasta  su  tiempo. 

Nueva  de  que  el  armada  haya  ido  aun  á  Gonstanlinopla 
yo  no  la  tengo ,  aunque  he  dejado  cuidado  á  diversas  perso- 
nas que  me  avisen  dello :  serlo  ha  mas  presto  el  virey  de  Ña- 
póles por  tener  el  confin  á  setenta  ó  ochenta  millas  y  haber 
mas  de  cuatrocientas  de  aquí  á  la  Belona ,  y  ansí  habrá  él 
dado  noticia  á  V.  M.  ó  la  podrá  dar  mas  brevemente  que  yo 
de  aquí.  Y  Nuestro  Señor  guarde  la  vida  de  V.  M.  como  la 
cristiandad  ha  menester.  De  Mesina  á  IG  (1)  de  noviembre 
1565. — Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  Reales  pies  y  ma- 
nos besa. — Don  García  de  Toledo. 

Sobre. — A  la  S.  G.  R.  M.  del  Rey  nuestro  señor. — En 
manos  del  secretario  Francisco  de  Eraso. 

(1)  Está  enmendado  y  jmede  leerse  26. 


Caria  original  de  D.  Garda  de  Toledo  á  Eraso ,  fecha  en 
Mesina  á  26  de  noviembre  de  i  565. 


Manifiesta  su  inquietud  porque  el  gran  maestre  descuida  la  for- 
tificacion  de  Malta — Dinero. 


(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1129.^ 
Ille.  Se.^or: 

Porque  dentro  de  pocos  días  escrebiré  á  S.  M.  dándole 
cuenta  de  lo  que  acá  se  ofresce,  y  se  enviará  el  bilanzo  del 
dinero  que  se  ha  rescibido  y  gastado  este  verano,  no  rae  alar- 
garé en  esta ,  la  cual  es  solamente  para  remitirme  á  lo  que 
V.  m.  verá  que  escribo  á  S.  M.  sobre  la  fortificación  de  Malta, 
porque  no  rae  aquieta  nada  ver  la  inresolucion  que  el  maestre 
tiene  en  cosa  de  tanta  iraportancia :  y  pues  lo  es,  no  será  ne- 
cesario acordar  á  v.  m.  que  se  responda  y  provea  con  tiempo 
á  todo  lo  que  S.  M.  será  servido  mandar  hacer,  porque  es- 
tamos ya  cerca  de  la  mitad  del  invierno  y  el  verano  se  acerca. 
El  embajador  de  Genova  me  escribió  que  se  habian  aceptado 
las  pólizas  de  los  100  mil  escudos,  á  los  cuales  no  se  ha  to- 
cado hasta  agora ;  y  como  digo,  con  el  primer  correo  escre- 
biré á  S.  M.  lo  que  se  habrá  hecho  en  todo.  Yo  ando  todavía 
con  poca  salud ,  y  no  pude  pasar  adelante  con  la  quina  que 
comencé  á  tomar,  porque  me  enflaquecía  mucho  la  cabeza, 
que  lo  mismo  me  ha  acaescido  otras  dos  veces  que  la  he  que- 
rido tomar  en  invierno.  Acódenme  todavía  los  temblores  al 
brazo,  que  cierto  me  dan  fastidio.  V.  m.  me  avise  de  su  salud 
y  de  la  de  mi  señora  D.*  Mariana,  cuyas  manos  beso.  Y 
Nuestro  Señor  guarde  y  acreciente  la  Ule.  persona  de  v.  m. 


como  desea.  De  Mesina  á  26  (1)  de  noviembre  de  1505. — 
Servidor  de  v.  m. — Don  García  de  Toledo. 


Copia  de  Relación  de  lo  que  se  entiende  por  letras  (2)  de 
Constanlinopla  de  27  de  ncDiemhre  de  15G5. 

Venidos  á  D.  García  de  Toledo  en  2Í  de  enero. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  m'im.  1130.^ 

Que  á  los  nueve  del  corriente  la  armada  hizo  su  entrada, 
con  habella  hecho  de  noche  todas  las  galeras  que  eran  copas 
y  mal  en  orden ,  y  veinte  y  ocho  dellas  entraron  á  hora  de 
tercia  en  orden  y  con  gran  triunfo ,  disparando  tres  veces  la 
artillería  por  amor  del  pueblo ,  que  ansí  lo  ordenó  el  gran 
turco ;  y  de  cuantos  han  venido,  prometo  á  V.  E.  que  tienen 
poca  gana  de  tornar ,  y  entre  combatientes  y  remeros  han 
hecho  la  reseña  y  les  faltan  de  26  mil  hombres. 

Que  á  los  17  del  presente  besaron  las  manos  al  gran  turco 
los  dos  bajaes  Mostafá  y  Piali ,  con  grandes  presentes  de  ar- 
gentería, paños  de  oro,  de  seda  y  lana  por  cuarenta  mil  es- 
cudos ;  y  el  presente  de  Mostafá  seria  de  treinta  mil ,  y  el  de 
Piali  de  diez  mil.  Se  esperaba  alguna  novedad,  y  no  se  ha 
hecho  ninguna  demostración. 

Que  después  de  la  llegada  del  armada  y  de  haber  besado 
las  manos  los  bajaes ,  todos  los  aparatos  y  furias  marítimas 
de  armar  han  cesado  y  no  se  trabaja  mas  en  el  arzanal  de 


(1)  Este  26  está  enmendado  y  parece  que  dice  \6. 

(2)  Se  citan  en  carta  de  D.  García  á  S.  M.  de  2ü  de  enero  <le 
i56G,  con  la  cual  los  envío. 


i7 

priesa ,  sino  medianamente ,  y  no  obstante  que  han  pasado 
tres  audiencias  después  de  la  llegada  del  armada ,  no  se  ha 
hecho  otra  deliberación ,  ni  hay  otra  nueva  de  armada  para 
empresa;  y  por  opinión  de  estos  grandes  que  saben  lo  intrín- 
seco ,  no  se  hará  armada  para  empresa  ninguna  esta  prima- 
vera, ni  se  armarán  mas  de  cincuenta  ó  sesenta  galeras ,  y 
quizá  menos ,  para  guardia  de  sus  países ,  y  esto  por  los  res- 
pectos que  abajo  diré  á  V.  E.  El  principal  dellos  es  que  á 
los  16  del  presente  han  llegado  en  esta  corte  estafetas  del 
rey  de  Transilvania  y  del  bassa  de  Tamesbarc  y  Buda ,  los 
cuales  dicen  que  los  ejércitos  de  S.  M.  Cesárea  en  Hungría 
fingiendo  de  retirarse,  con  estratajema  habían  tornado  en 
daño  del  transilvano ,  y  que  ya  le  tenían  ocupado  en  una 
ciudad  fuerte  y  tenían  de  cuarenta  mil  soldados  en  los  confi- 
nes y  que  todavía  engrosaban,  la  cual  nueva  ha  hecho  tornar 
loco  al  gran  turco  porque  de  hora  en  hora  esperaba  el  tri- 
buto, y  ha  hecho  publicar  guerra  bandida  por  todo  su  estado 
contra  S.  M.  Cesárea,  amenazando  de  querer  ir  en  persona 
esta  primavera :  yo  no  lo  creo. 

Que  ha  hecho  por  agora  provisión  de  algunos  sanjaques, 
demás  de  aquellos  que  se  hallaban  en  los  confines  con  haber 
mandado  alBelerbey  de  la  Grecia,  el  cual  se  hallaba  en  Sofía, 
que  se  retire  hacia  aquella  parte.  La  otra  ocasión  es  que  li- 
cadí  de  la  Asía,  los  cuales,  como  por  otra  mía  he  escrito, 
han  habido  mandamiento  deste  señor  para  ver  cuanta  canti- 
dad de  bogadores  podrían  sacar  por  cada  (i)  y  han 
respondido  que  muy  poca  gente  pueden  sacar  por  este  año 
de  aquellas  partes. 

Que  no  tienen  pólvora  ni  pelotas  que  basten  para  hacer 

(1)  Al  margen  dice :  "  Esle  blanco  no  se  ha  acertado  á  leer,  aun- 
que no  importa." 

Tomo  XXX.  2 


18 

empresa  que  importe,  y  por  letras  han  dado  orden  que  se 
haga  cantidad  en  las  partes  de  Suria  de  donde  sale  gran 
cuantidad  de  salnitres  fsicj,  y  cierto  tienen  grandes  muni- 
ciones en  la  parle  de  Hungría ;  pero  aquí  están  desproveídos. 

Que  las  galeras  que  han  tornado,  y  especialmente  las 
viejas ,  tienen  necesidad  de  grande  aconcho ,  y  en  el  taraza- 
nal  hay  poquísimo  leñámen ,  ni  de  invernada  puede  venir  del 
mar  mayor,  excepto  alguna  poca  parte.  Todas  estas  cosas  han 
sido  revistas  de  quien  tiene  el  cuidado  después  de  la  venida 
del  armada,  y  haber  besado  las  manos  los  dichos  dos  bajaes,  y 
dicen  por  cosa  cierta  que  seria  un  forzar  la  natura  si  este  viejo 
obstinado  quisiese  hacer  armada ;  de  manera  que  no  habrá 
armada  por  todas  las  razones  dichas,  viendo  no  haber  comodi- 
dad en  Asia  de  remeros  y  de  Grecia  no  hay  orden,  siendo  por 
la  mayor  parte  los  casales  de  griegos,  los  cuales  no  van  de 
buena  gana,  ni  estos  tampoco  los  fuerzan  no  fiándose  dellos. 

Que  últimamente  envió  al  rey  de  Tártara ,  si  por  sus  di- 
neros ,  habiéndolos  menester ,  le  podría  acomodar  de  veinte 
mil  hombres  para  el  remo  :  no  es  venida  aún  la  respuesta; 
pero  juzgan  que  semejantes  hombres  no  habiendo  jamás  visto 
mar,  valdrán  poco,  ni  podrán  resistir. 

Que  este  gran  turco  es  cierto  rico  de  dineros  y  de  obe- 
diencia ;  pero  tiene  poca  gente  apropiada  á  la  guerra.  Por 
todas  las  dichas  razones  no  habrá  armada  para  empresa  por 
esta  primavera.  Por  lo  cual  me  ha  parescido  hacer  á  V.  E. 
la  presente  expedición  á  posta ,  á  tal  que  por  los  avisos  de 
aparatos  que  tengo  escrito  que  se  habían  hecho  antes  de 
llegar  el  armada ,  no  entre  V.  E.  en  hacer  gastos  demasia- 
dos. No  falta  con  todo  esto  de  hacer  fabricar  galeras  nuevas 
tanto  aquí  cuanto  en  el  Mar  Negro;  pero  no  con  aquella  priesa 
que  hacia  antes.  Yo  estoy  con  cuidado;  y  si  otra  nueva  nas- 
ciese ,  la  avisaré  luego. 


19 

Ayer  el  cadí  de  Body  hizo  decir  como  V.  E.  habia  ve- 
nido con  sesenta  galeras  en  el  archipiélago. 

Este  gran  turco  comienza  á  ser  impotente ,  habiéndole 
afligido  mucho  el  no  haber  podido  su  armada  tomar  á  Malta. 
Cuando  quiere  caminar  se  hace  llevar  de  dos  eunucos,  ha- 
biéndole faltado  la  fuerza  de  los  pies :  cierto  viviiá  poco.  Es 
de  edad  de  78  años.  La  peste  procede  honestamente ,  de  la 
cual  Dios  nos  guarde. 


Copia  de  Avisos  (\)  de  levante,  que  envió  el  visurey  de  Ña- 
póles á  D.  García  de  Toledo,  de  Constaníinopla  á  27  de 
noviembre  de  1565. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1130.) 

Que  41  galeras  del  armada  del  turco,  las  que  estaban 
mas  mal  en  orden,  entraron  en  Constantinopla  á  los  9  de  no- 
viembre de  noche ,  y  luego  se  fueron  al  atarcenal  sin  hacer 
salva  ninguna  al  serrallo  del  turco,  y  que  la  noche  siguien- 
te las  desarmaron. 

Que  otro  dia  por  la  mañana  entró  asimismo  el  resto  de 
toda  la  armada  en  el  puerto  de  aquella  ciudad ,  haciendo  sal- 
va al  serrallo ,  y  que  iban  delante  las  dos  galeras  de  los  dos 
bajaes ,  las  cuales  llevaban  en  medio  la  del  turco ,  y  que 
eran  112  galeras ,  3  galeotas  y  6  mahonas  gruesas  y  las  re- 
molcaban las  galeras,  y  que  luego  se  fueron  al  taracenal,  y 
que  aquel  mesmo  dia  se  desarmaron  todas,  y  que  son  155 

(1)  Se  citan  en  carta  de  D.  García  á  S.  M.  de  2C  de  enero  1366, 
con  la  cual  los  envió. 


galeras,  5  galeotas  y  G  mahonas,  las  cuales  hablan  entrado 
aquel  (lia  y  la  noche  antes  en  aquel  puerto. 

Que  á  la  guardia  de  Rodas  habían  quedado  cinco  gale- 
ras y  por  capitán  deltas  Garucabey,  y  á  la  de  Alejandría  Si- 
rocco  raíz  con  otros  cinco,  y  que  á  Argel  se  volvieron  las 
treinta  que  habían  venido  de  allí  para  el  armada. 

Que  creyéndose  que  el  turco  hiciera  cortar  las  cabezas 
á  los  dos  bajaes  no  lo  hizo ,  antes  dicen  que  le  fué  á  hablar 
el  papa  de  los  turcos,  y  le  dijo  que  no  tenían  culpa  ellos, 
sino  que  la  voluntad  de  Dios  había  sido  de  que  no  se  tomase 
á  Malta ,  y  que  muchas  veces  su  profeta  Mahoma  había  com- 
batido con  sus  enemigos ,  y  que  no  los  había  podido  vencer, 
antes  había  sido  vencido ,  y  que  era  menester  tornar  á  ten- 
tar á  Dios  y  ir  sobre  Malta,  y  que  de  todo  esto  fueron  causa 
las  mujeres  del  turco  que  primero  se  lo  habían  rogado;  pero 
que  con  lodo  esto  respondió  el  turco  muy  airado,  diciendo 
que  sí  Dios  le  daba  vida  de  dos  años  que  había  de  tomar  á 
Malta. 

Que  á  los  17  de  noviembre  fueron  á  besar  las  manos  al 
turco  los  dos  bajaes  y  le  hicieron  un  presente  de  125  ropas 
de  diversas  sedas  y  oro  con  mucha  plata,  y  que  estuvieron 
en  su  cámara  cerca  de  una  hora ,  que  fueron  vistos  salir  muy 
alegres  y  que  no  se  entendía  que  los  privasen  de  oficio. 

Que  aquel  día  mandaron  volver  al  taracenal  la  maes- 
tranza á  trabajar,  á  la  cual  poco  antes  se  había  mandado 
que  cesase ,  no  obstante  que  no  eran  aun  llegados  allí  mas 
de  dos  de  los  navios  que  aguardaban  con  leñame  para  las 
galeras:  que  decían  que  el  turco  estaba  determinado  de  que 
se  volviese  á  hacer  la  empresa  de  Malta ,  y  que  el  armada 
será  mucho  mayor  de  la  del  año  pasado,  porque  en  llegan- 
do los  dos  navios  que  se  aguardan  con  el  leñame  dentro  de 
dos  meses  se  habrán  adreszado  todas  las  galeras  y  se  comea- 


21 

zaráa  las  44  de  nuevo ,  y  que  para  el  tiempo  nuevo  estarán 
en  orden  200  galeras. 

Que  lo  de  los  remeros  para  la  dicha  armada  estaba  ya 
ordenado  que  estuviesen  en  orden,  y  asimismo  todas  las  mu- 
niciones y  pertrechos  de  la  dicha  armada. 

Que  el  mismo  dia  que  estos  bajaes  entraron  á  besar  las 
manos  al  turco ,  se  dio  orden  que  todos  los  soldados  de  la 
Grecia  y  Natolia  estuviesen  á  punto  á  la  primavera  para  la 
guerra  de  Hungría ,  donde  se  dice  que  el  turco  quiere  ir  en 
persona ;  pero  que  esto  podria  ser  al  contrario ,  y  que  qui- 
siese venir  á  estar  en  Lepanto  con  su  ejército  á  la  Belona 
para  dar  calor  á  lo  de  Malta,  porque  Mahomel,  gran  bajá  y 
el  agá  de  los  genízaros  han  prometido  de  venir  ellos  en  per- 
sona áesta  jornada. 

Que  el  turco  no  enviará  mas  á  Mostafá  bajá ,  por  ser  hom- 
bre viejo. 

Que  V.  E.  mande  proveer  todas  las  tierras  de  marina 
deste  reino ,  porque  los  turcos  suelen  amenazar  á  un  lugar 
y  ir  en  otro. 

Que  saliendo  el  armada  verná  uno  dellos,  el  cual  se 
ofresce  al  servicio  de  S.  M.  y  de  V.  E.;  y  que  sucediendo 
cosa  de  momento  avisarán  con  correos. 

Que  el  dicho  hace  saber  á  V.  E.  que  avise  á  los  de  Mal- 
ta, que  si  los  turcos  quisieren  hacer  algún  concierto  con 
ellos ,  que  adviertan  que  ninguna  cosa  que  les  prometan  les 
será  guardada. 

Que  todo  el  designo  de  turcos  es  ir  sobre  Malta ,  á  tal  que 
no  tengan  tiempo  de  fortificarse;  que  se  provea  aquella  isla 
de  gentes  y  victuallas ,  y  que  haga  salir  fuera  las  mujeres  y 
niños,  porque  cuando  los  turcos  entiendan  que  esto  no  hay 
dentro  combaten  friamente,  y  al  contrario  cuando  saben  que 
lo  hay  por  la  ganancia  que  pretenden  en  ganar  esclavos. 


99 


Torno  á  acordar  que  en  Malta  se  provea  de  mas  gente 
que  el  año  pasado,  porque  el  ejército  que  se  piensa  el  vera- 
no será  al  doble,  y  que  primeramente  se  pornán  sobre  Malta 
la  Vieja,  por  haber  conoscido  los  turcos  que  aquella  tierra 
ha  sido  causa  del  socorro  de  Malta. 

Que  á  los  2  i  de  noviembre  llegó  allí  nueva  como  70  ga- 
leras de  cristianos  y  con  ellas  D.  García  de  Toledo  habia  he- 
cho una  gran  correría  hacia  Gandía  y  corrido  hasta  Rodas 
y  tomado  algunas  naves,  por  lo  cual  el  turco  mandó  que  se 
pusiesen  en  orden  100  galeras,  y  que  no  habiendo  forma 
para  ello,  mandó  que  saliese  Aliportuc  de  allí  á  los  25  del 
dicho,  llevando  en  su  compañía  á  Pedro  Gochino,  embajador 
del  rey  de  Portugal ,  el  cual  se  debe  embarcar  para  Mesina, 
habiéndolo  ya  mandado  despachar  el  gran  turco ,  y  que  por 
respecto  del  invierno  se  podrá  con  dificultad  trabajar  en  las 
galeras  por  estar  al  descubierto ,  demás  que  tampoco  hay  re- 
caudo de  leñámen. 


Carta  original  de  D,  García  de  Toledo  á  S.  M. ,  fecha  en 
Mesina  á  último  de  noviembre  de  1565. 

Sobre  las  fortificaciones  de  Malta  y  la  Goleta  y  modo  de  resistir  á 
la  armada  turca  si  se  dirige  contra  cualquiera  de  aquellas  dos  pla- 
zas— Dinero — Su  Santidad  envía  un  ingeniero  al  gran  maestre. 

(Archivo  general  de  Simancas.— Estado,  legajo  núm.  1129.^ 

S.  G.  R.  M. 

Después  de  haber  escrito  á  V.  M.  á  los  16  del  presente 
llegó  aquí  Jorge  de  Grimaldo  (sin  haber  hecho  presa  nin- 
guna) que  habia  ido  en  corso ,  como  á  V.  M.  escribí  á  los  19 


25 

del  pasado,  el  cual  dice  que  en  iMilü,  que  es  una  isla  del 
archipiélago ,  á  donde  tocó ,  y  con  otras  personas  que  habló 
y  diferentes  navios  que  encontró  certificaban  la  venida  del 
armada  del  turco  para  este  año  sobre  Malta  ó  la  Goleta,  y  lo 
mismo  tengo  por  letras  de  Corfú  y  del  Zante,  y  personas  que 
están  en  Gonstantinopla  que  se  pagan  en  Ñapóles ,  me  pa- 
resce  que  certifican  lo  mismo.  He  escrito  lo  que  conviene 
dar  priesa  en  la  fortificación  de  Malta  y  dalla  también  en  la 
defensión  de  la  Goleta.  En  respuesta  de  la  que  escribí  sobre 
esta  materia  al  maestre  me  envió  la  carta  que  será  con  esta, 
con  la  cual  ha  enviado  al  comendador  Maldonado ,  y  la  causa 
de  su  venida  es  á  pedirme  diez  ó  doce  mil  ducados  que  esta 
corte  debe  á  la  religión  del  tiempo  de  Juan  Vega  y  del  duque 
de  Medina ;  y  porque  no  haya  ningún  género  de  disculpa 
ni  de  achaque  (no  obstante  que  lo  de  aquí  esfá  en  todo  el 
extremo  de  necesidad  que  se  puede  pensar)  le  he  hecho  dar 
pólizas  de  mercaderes  abonados  en  que  prometen  de  pagár- 
selos dentro  de  seis  meses ,  para  que  sobre  ellas  él  pueda 
hacer  el  partido  que  le  parescerá  para  poderse  luego  apro- 
vechar del  dinero ,  y  en  este  medio  se  irá  pensando  modo  de 
á  donde  poder  sacar  este  dinero.  Ha  pasado  por  aquí  un  in- 
geniero que  Su  Santidad  ha  prestado  al  maestre :  quiera  Dios 
que  se  den  con  él  la  maña  que  conviene ,  que  el  tiempo  que 
se  ha  perdido  no  ha  sido  de  poco  daño. 

Lo  de  la  Goleta  me  da  mucha  pena ,  porque  no  le  veo  yo 
ningún  género  de  socorro  si  el  armada  viene  poderosa  este 
año.  Si  lo  dilatase  para  el  otro,  podríase  tener  mejor  espe- 
ranza. Yo  dudo  mucho  que  las  cuarenta  galeras  de  Barce- 
lona no  podrán  ser  acabadas  y  proveídas  de  arreos  este  ve- 
rano. Por  las  quince  que  se  han  de  hacer  aquí,  como  tengo 
escrito  á  V.  M.,  ha  dias  que  tengo  escrito  al  visorey  de 
Ñapóles  que  me  envíe  una  patente  para  cortar  leñame  en 


Calabria  y  por  otros  buques  de  aquel  reino  cercanos  á  esta 
ciudad  por  no  habello  en  este  con  las  ventajas  y  beneficio  de 
la  hacienda  de  V.  M.  acostumbradas  en  aquel  reino,  y  según 
entiendo  poníase  en  ello  dificultad ,  aunque  respuesta  del 
virey  no  la  he  tenido.  Ansí  que  viendo  pasada  la  meitad  del 
invierno  y  estas  cosas  mas  atrás  de  lo  que  convendría,  tengo 
casi  por  imposible  que  la  armada  de  V.  M.  pueda  resistir 
este  año  á  la  del  turco ,  porque  demás  del  gasto  grande  que 
se  hace  con  las  naves,  es  su  ayuda  tan  incierta  que  no  puede 
considerarlo  sino  quien  otras  veces  lo  ha  probado ,  y  quien 
se  ha  visto  en  esta  ocasión  pasada  tan  cerca  de  tornarlo  de 
nuevo  á  ver ;  y  si  dijese  á  V.  M.  que  era  una  de  las  cosas 
que  mas  me  ha  trabajado  y  inquietado  este  verano ,  quizás 
no  me  alargaría  de  la  verdad.  Porque  aunque  ha  sido  for- 
zoso para  lo  de  Malta  el  amedrentar  los  enemigos  con  gran- 
des aparatos  y  tenerlos  con  temor  para  que  no  se  dividiesen, 

'  sabia  y  sé  bien  la  esperanza  que  podía  tener  en  ellas  para 
contrastar  con  armada  tan  grande.  Ansí  que  faltando  los 

(  buques  dichos  y  viniendo  los  enemigos  tan  poderosos  como 
el  año  pasado  (si  ya  no  lo  viniesen  mas) ,  dubdo  mucho  que 
no  se  podrán  resistir  por  mar.  Y  confieso  á  V.  M.  que  yo 
no  sé  imaginarme,  aunque  lo  he  pensado  mucho,  cómo 
poder  socorrer  la  Goleta  ni  dalle  ninguna  ayuda  sino  la  que 
se  le  diese  antes  de  ser  cercada.  He  apuntado  en  la  carta 
pasada  que  en  esta  fuerza  es  menester  meter  un  grueso  golpe 
de  gente ,  y  lo  mismo  en  Malta ,  aunque  en  la  Goleta  por  ser 
la  plaza  pequeña  se  pasará  trabajo ;  pero  atenderán  á  guar- 
dar los  contrafosos  y  á  tener  fuera  la  mayor  cuantidad  que 
pudieren.  Pero  este  es  negocio  que  toca  á  los  que  la  tienen 
á  cargo,  y  á  lo  que  V.  M.  mandará  determinar,  y  ansí  no 
me  alargaré  en  él.  Y  parcsciéndole  á  V.  M.  que  cumple  á  su 
servicio  el  poner  esta  gente  en  estos  presidios,  converná  que 


25 

V.  M.  mande  de  donde  es  servido  que  se  saque  en  caso  que 
el  armada  venga,  porque  no  se  pierda  tiempo  en  lo  que  V.  M. 
determinare,  y  cuando  viniese  converná  que  la  de  V.  M. 
esté  aquí  junta  para  primero  de  abril ;  y  ansí  suplico  á  V.  M. 
mande  despachar  luego  á  Juan  Andrea,  porque  pueda  poner 
las  suyas  en  orden  y  servir  acá  en  lo  que  se  ofresciere  y 
V.  M.  mandare ,  y  viniendo  podráse  esperar  siendo  V.  M. 
servido  á  ver  á  donde  se  asienta ,  y  siendo  sobre  Malta  po- 
drán tomar  la  gente  que  se  pudiere  de  la  Goleta  ó  de  otra 
parte ,  y  ir  con  ella  á  quemar  y  destruir  sus  tierras  y  á  escar- 
mentarla destas  venidas  que  hace ,  y  si  se  pusiere  sobre  la 
Goleta  hacer  lo  mismo  con  la  gente  de  Malta ,  y  siendo  infe- 
riores de  navios,  por  agora  no  me  ocurre  pensar  en  que  se 
les  pueda  hacer  otro  daño.  Si  por  caso  dejasen  la  Goleta  y 
Malta  no  hay  que  temer  de  Córcega,  ni  Gerdeña,  ni  Mallorca, 
si  están  en  términos  que  puedan  esperar  veinte  días  el  socor- 
ro, porque  como  son  islas  grandes,  con  la  gente  que  con  el 
armada  podria  tomar  destas  dos  partes  seria  fácil  cosa  socor- 
rerlas, y  en  tal  caso  necesaria  la  ida  de  levante.  En  tierra 
firme  no  creo  que  osarán  poner  el  pié  para  emprender  cosa 
que  puedan  sustentar. 

Con  estas  nuevas  me  ha  parescido  alargar  la  ida  de  Pa- 
lermo  por  agora^  y  llegarme  á  Catania  á  tratar  de  la  fortifi- 
cación de  aquella  ciudad  y  del  puerto  de  Augusta ,  en  lo  cual 
procuraré  de  poner  mano  si  hubiere  forma  de  dinero  para 
ello ,  y  tiempo  para  poder  poner  adelante  la  fábrica  este  in- 
vierno. Me  partiré  de  aquí  en  haciendo  tiempo  para  cuatro 
ó  seis  galeras  que  me  han  de  llevar,  y  así  se  podrá ,  siendo 
V.  M.  servido  dello,  juntar  el  parlamento  para  dar  orden  ea 
lo  de  las  gabelas ,  ó  ejecutarla  sin  él  conforme  á  la  orden 
que  en  respuesta  de  mis  cartas  se  rae  diere. 


2G 

De  mucha  importancia  ha  sido  la  última  provisión  que 
V.  M.  ha  mandado  hacer  de  los  cient  mil  escudos,  y  jun- 
tándose con  las  demás  que  V.  M.  ha  hecho  han  sido  muy 
notadas  en  Italia,  á  donde  semejantes  cosas  dan  mucha  re- 
putación. 

A  la  Goleta,  como  he  escrito  por  otras,  con  lo  que  se  ha 
enviado  proveeré  á  cumplimiento  de  cuarenta  mil  ducados, 
porque  los  veinte  mil  á  cumplimiento  de  los  sesenta  gastá- 
ronse en  bizcochos ,  como  V.  M.  mandó ,  y  por  los  malos 
tiempos  que  ha  hecho  no  ha  sido  posible  enviar  galeras  á  la 
Goleta  para  sacar  la  gente  que  allí  se  puso  este  verano.  Háse 
fletado  dias  ha  una  nave  para  ir  por  ella  y  llevarle  alguna 
cuantidad  de  trigo  y  cebada  y  otras  cosas ,  y  tampoco  ha 
hecho  tiempo.  Gomo  le  haga,  partirá  y  traerá  aquella  gente, 
y  en  viniendo  haré  que  queden  aquí  hasta  dos  mil  hombres 
debajo  de  diez  capitanes ,  y  los  demás  se  reformarán ,  que 
con  las  pagas  dellos  y  de  los  oficiales  se  ahorrarán  al  mes 
cerca  de  seiscientos  escudos.  Quedo  entendiendo  en  ver  y 
concluir  las  cuentas  de  todo ,  y  brevemente  se  enviarán  á 
V.  M.  para  que  vea  lo  que  se  ha  gastado  y  pueda  mandar 
descontar  á  los  capitanes  de  las  galeras  lo  que  hubieren  res- 
cibido. 

Cuando  partió  D.  Alvaro  de  Bazan  de  aquí,  no  fué  tan 
proveído  como  yo  quisiera,  porque  no  faltase  dinero  para  des- 
pedir y  acabar  de  pagar  las  naves  que  se  contentaron  de 
hacer  suelta  de  alguna  cantidad  de  dinero,  la  cual  entre  las 
que  le  hicieron  ha  llegado  á  la  suma  de  15,000  ducados,  y 
y  como  vi  la  última  provisión  que  V.  M.  hacia  de  dinero 
envié  con  diligencia  á  Ñapóles  cédulas  de  ocho  mil  ducados, 
para  que  se  les  diesen  allí  ó  en  Genova,  y  por  haber  tres 
dias  que  era  partido  no  le  alcanzaron  mis  pólizas ,  y  ansí  me 


27 

las  lornaroQ  á  enviar  aquí.  Creo  que  montará  buena  suma 
lo  que  ha  rescibido,  de  lo  cual,  como  digo,  se  dará  breve- 
mente noticia  á  V.  M. 

El  embajador  de  Genova  proveyó  en  Lombardía  cuatro 
mil  escudos  para  la  gente  que  habia  de  levantar  Césaro  de 
Ñapóles  ,  y  aunque  con  correo  propio  escribí  á  Milán  y  á  Ge- 
nova al  tiempo  que  se  pudo  que  estos  dineros  no  se  diesen, 
y  si  los  hubiesen  dado  que  se  cobrasen ,  pues  la  gente  no  era 
levantada,  veo  que  no  han  cobrado  sino  seiscientos  sesenta 
y  tres  escudos :  quedan  á  darse  tres  mil  y  trecientos  y  treinta 
y  siete  escudos.  V.  M.  será  servido  mandar  dar  orden  allí 
para  que  se  cobren.  Y  Nuestro  Señor  dé  á  V.  M.  largos  años 
de  vida  como  la  cristiandad  ha  menester.  Ds  Mesina  á  último 
de  noviembre  de  1565. — Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus 
reales  pies  y  manos  besa. — Don  García  de  Toledo. 

Sobre. — A  la  S.  G.  R.  M.  del  Rev  nuestro  señor. 


1  Copia  de  carta  que  D.  García  de 
Toledo  escribió  al  aran  maestre  de 
San  Juan  y  á  su  Consejo  en  26  de  oc- 
tubre de  1565. 

ni.  "^  y  Rev.  "O  señor :  Por  las  cosas  pasadas  puede  V.  S. 
Ilustrísima  considerar  cuanto  conviene  remediar  á  las  por- 
venir, y  siendo  solo  Dios  poderoso  para  restituir  el  tiempo 
que  se  perdiese,  me  ha  parescido  viendo  lo  que  cumple  no 
perderle  en  acordar  por  bien  general  desa  sacra  religión  en 
esta  carta  lo  que  á  boca  dije  á  V.  S.  I.  en  Malta  cuando  des- 
pués del  socorro  partí  de  ahí,  que  fué  decirle  que  me  pare- 
cía que  ya  se  perdía  tiempo  en  poner  mano  en  obra  tan  ne- 
cesaria como  la  pasada  de  esa  religión  al  sitio  de  San  Telmo, 


28 

la  cual  obra  lengo  yo  por  mucho  mas  fácil  que  olra  ninguna 
que  (le  tierra  y  fagina  se  pudiese  hacer,  porque  siendo  la 
piedra  dulce  y  fácil  de  cortar,  ahondándose  los  fosos  queda 
hecha  la  muralla  de  la  misma  peña,  y  en  las  partes  donde 
lo  sufriere  la  montaña  se  puede  sacar  della  parte  de  los  dos 
caballeros  de  la  frente,  pues  por  las  otras  partes  el  sitio  es 
tal  que  no  se  puede  combatir,  tanto  mas  que  es  fácil  cosa  el 
cortarlo  y  hacerle  sus  murallas  á  los  lados  como  por  la  fren- 
te ,  ni  para  esto  es  menester  gran  cuantidad  de  gastadores 
ni  de  fabricadores ,  porque  el  sitio  de  la  montaña  es  tal  por 
lo  dicho,  que  los  excusa,  ni  se  ha  de  poner  piedra  ni  cal  sino 
á  donde  el  monte  faltase,  y  cuando  esta  se  pusiere  no  ha  de 
ser  entera  la  piedra  como  hasta  aquí,  porque  de  cuantos  mas 
pedazos  fuere  mas  perfecta  será  la  obra,  ni  á  donde  se  su- 
pliere de  fábrica  no  ha  de  ser  el  muro  grueso  sino  sotil ,  y 
el  terrapleno  de  tierra  grande.  Para  esta  obra  es  menester 
gran  cuantidad  de  tallamontes ,  y  digo  que  si  V.  S.  I.  hubie- 
se enviado  aquí  en  Sicilia  que  le  habría  hecho  dar  hasta  mil, 
y  se  le  darán  ahora  y  mas  si  mas  quisiere,  enviando  recaudo 
de  dineros  para  ellos ,  y  también  se  darán  gastadores  y  fabri- 
cadores los  que  V.  S.  I.  quisiere.  Y  si  en  esta  obra  se  pone 
luego  mano  sin  perder  mas  tiempo,  sé  que  para  el  verano 
que  viene  estará  en  defensa  si  se  toma  como  semejantes  co- 
sas se  deben  tomar;  y  si  el  tiempo  se  pierde,  está  claro  el 
daño  que  el  verano  que  viene  podría  suceder.  Por  muchos 
respectos  me  conviene  saber  lo  que  en  esto  se  hace  ó  se  ha 
de  hacer,  que  si  es  conforme  á  la  determinación  que  V.  S.  I. 
me  dijo  que  tenia  de  morir  ó  defender  esa  isla,  justo  es  que, 
pues  no  se  ha  comenzado,  se  comience  luego;  y  si  me  dijie- 
se  V.  S.  I.  que  no  tiene  ingeniero,  dende  el  primer  día  que 
la  armada  se  fuó,  se  debía  haber  enviado  una  galera  por  el 
del  duque  de  Florencia,  ó  por  otro,  que  no  faltará.  Y  si  se 


29 

loma  el  dicho  sitio  de  San  Telmo,  queda  el  mesmo  caslillo 
sin  ser  ofendido  de  ninguna  parte,  y  soy  de  parecer  que  los 
fosos  que  hay  cavados  en  la  peña  viva  que  son  bien  grandes 
y  hermosos,  que  les  mande  V.  S.  I.  volver  sus  lamas  y  ser- 
virse dellos  por  cisternas,  que  siendo  en  lo  mas  bajo,  po- 
dránse  recoger  á  ellas  toda  el  agua  de  la  montaña,  y  con  esto 
dende  el  primer  dia  la  tendrá  V.  S.  para  tres  ejércitos.  Y 
porque  me  paresce  que  basta  lo  dicho  para  personas  tan  pru- 
dentes y  cuerdas  como  V.  S.  I.  y  esos  señores,  no  me  alar- 
garé mas  en  esta  materia,  pues  por  mi  parte  cumplo  con  ha- 
berlo acordado  y  acordarlo  de  nuevo,  concluyendo  con  decir 
que  cuando  ahí  se  hicieren  las  diligencias  posibles ,  se  dará 
causa  que  las  hagan  los  que  están  de  fuera,  y  cuando  no  po- 
dría suceder  lo  contrario,  ni  de  mi  opinión  se  aguardara  res- 
puesta de  los  príncipes  cristianos ,  á  quien  Y.  S.  ha  escrito, 
pues  la  dilación  dellos  traerla  consigo  el  inconveniente  ya  di- 
cho, tanto  mas  siendo  cosa  tan  clara  el  convenir  ansí,  que  no 
hay  ninguno  que  le  pueda  parescer  sino  bien  la  determina- 
ción de  Y.  S.  Cuya  I.  y  R.  persona,  etc.  De  Mesina  á  2G 
de  octubre  1565. 


Copia  de  caria  que  el  gran  maestre  escribe  á  D.  Garda  de 
Toledo  á  H  de  noviembre  de  1565. 

Ill.^«  y  Ex.^°  Señor  : 

Habiendo  pasado  por  mí  lo  que  V.  E.  ha  visto  y  sabe,  y 
teniendo  la  experiencia  de  tantos  años  de  muchas  cosas ,  no 
podría  sin  mucho  cargo  mió  dejar  de  conoscer  cuan  bueno 
es  el  aviso  que  V.  E.  me  da  por  la  suya  de  26  del  pasado, 
sobre  el  poner  la  mano  en  la  fábrica  de  la  nueva  ciudad,  de 


30 

que  le  beso  las  manos  mil  veces  y  del  ofrescimiento  que  me 
hace  de  la  gente  que  habremos  menester  pagándola,  y  cier- 
tamente cuando  otra  cosa  no  fuese,  recreóme  tanto  en  estas 
fábricas,  que  sé  ha  parescido  bien  y  he  hallado  han  sido  ne- 
cesarias las  que  en  mi  tiempo  se  han  hecho,  y  entendiendo 
yo  tanto  lo  que  convernía  esto  para  seguridad  desta  religión 
y  mi  reposo  y  de  los  que  sucederán  en  mi  lugar ,  no  se  ha 
de  creer  lo  desee  nadie  mas  que  yo ;  pero  muchas  cosas  que 
son  de  harta  consideración ,  no  me  dejan  resciba  el  conten- 
tamiento que  me  seria  haber  ya  puesto  la  mano ,  y  sin  las 
otras  cosas  que  con  V.  E.  no  quiero  yo  encubrir  ninguna, 
que  me  tienen  suspenso  en  esto,  es  muy  principal  hallarse 
esta  religión  tan  al  cabo  del  saco,  que  certifico  á  V.  E.  que 
para  el  ordinario  entretenimiento  nuestro  no  se  podrá  suplir 
sin  harto  fastidio ,  quedar  tras  esto  con  tantas  ruinas  despo- 
jado de  lo  que  tantos  años  habíamos  recogido ,  sin  municio- 
nes, sin  artillería  y  sin  tantas  otras  cosas,  no  sé  como  se 
puede  poner  la  mano  en  una  tan  grande ,  sin  que  haya  mas 
tiempo  para  recoger  con  que  poder  comenzalla.  Todavía  con 
la  primera  fragata  que  de  aquí  partió  después  de  ida  la  ar- 
mada turquesca ,  escribí  para  que  viniese  un  ingeniero  que 
está  en  Florencia ,  y  tengo  respuesta  de  Roma  aguardaban 
cada  dia  saber  si  se  le  daría  licencia ,  y  me  persuado  estará 
á  la  hora  de  agora  bien  cerca  de  Sicilia.  Nuestro  Señor  sea 
servido  de  concederme  que  yo  pueda  deber  en  esto  lo  que 
conviene  á  esta  religión,  que  estoy  con  tanto  desgusto  de  mil 
cosas  que  me  dan  sin  esto  infinita  pena ,  que  no  me  puedo 
alegrar  con  ninguna,  ni  me  deja  esto  gozar  un  momento  de 
la  victoria  pasada,  como  dirá  á  V.  E.  el  comendador  Anto- 
nio Maldonado  portador  desta,  á  quien  envío  sin  las  otras 
cosas  para  que  procure  de  cobrar  desa  regia  corte  lo  que  se 
nos  debe,  que  pues  se  vée  manifiestamente  la  causa  que  te- 


51 

nenios  de  que  nos  sea  satisfecho ,  no  puedo  creer  se  ponga 
mas  dilación  en  ello,  que  cuanto  puedo  lo  suplico  á  V.  E., 
y  que  al  sobredicho  Maldonado  le  mande  dar  la  fée  y  creen- 
cia que  á  mi  propia  persona  en  lo  que  de  mi  parte  le  dijere. 
Nuestro  Señor  guarde  la  111."^  persona  de  V.  E.  como  desea. 
En  Malta  á  8  de  noviembre  1565. — Servidor  de  V.  E. — El 
gran  maestre,  F.  Juan  de  Válete. 


Carla  original  de  D.  Sancho  de  Leiva  á  S.  M.,  fecha  en 
Ñapóles  á  1.°  de  diciembre  de  1565. 


Parecer  de  lo  que  debe  hacerse  para  la  defensa  de  la  Goleta  y 
Malta,  y  para  armar  galeras. 


f Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  nüm.  1054.^ 

S.  C.  R.  M. 

Recibí  la  carta  de  V.  M.  de  los  6  del  pasado.  Muy  hu- 
milmente  beso  las  reales  manos  de  V.  M.  por  la  memoria 
que  tuvo  de  mandármela  escrebir.  A  lo  que  yo  he  escrito  y 
escribo  agora  al  secretario  Gonzalo  Pérez ,  á  quien  me  remi- 
to sobre  la  defensión  de  la  Goleta  y  otras  partes ,  me  ha  mo- 
vido el  gran  celo  que  tengo  al  servicio  de  V.  M.,  á  cuya  real 
persona  supUco  humilmente  reciba  mi  voluntad,  la  cual  me 
queda  tan  grande  como  siempre  para  emplearme  en  él  en 
todo  lo  que  V.  M.  será  mas  servido.  Cuya  S.  C.  y  real  per- 
sona Nuestro  Señor  guarde  con  aumento  de  mas  reinos  y  se- 
ñoríos como  los  criados  y  vasallos  de  V.  M.  deseamos.  De  Ña- 
póles á  1.°  de  diciembre  1565.— S.  C.  R.  M.— Humil  cria- 


52 

íniím  do  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  manos 

besa.  — Don  Sancho. 

Sobre. — A  la  S.  G.  R.  M.  el  rey  nuestro 
señor. 


Dentro  de  la  carta  (        .^^^^^'^  ^^  ^«''^'^  ''''^^P^^  «^  '''''- 
anterior  se  halla  la  si-  |  tarto  Gonzalo  Pérez.  De  Ñapóles  á  8 

^^^^^^^=  de  noviembre  de  ibQ5. 


En  la  carpeta       i\\q^  Señor  I  Por  la  vía  de  Olranto  ha  veni- 

ctice  de  letra  de 

Gonzalo  Pérez  do  aquí  nucva  que  el  turco  ha  sentido  mucho 

lo  siguiente:  ,     ,  i     nr  i  ,  • 

no  haberse  tomado  Malta,  y  que  hace  muchos 
«deofíancho^de  y  muy  soberbios  fieros,  y  ha  dicho  que  él  ha 
»cio  inJporu  qlie  dc  tomar  á  Malta  ó  perder  sus  estados.  Todo 

»  V.M.  la  leay  aun  . 

» los  de  su  conse-  se  pucdc  crccr  dc  su  soberbia  que  es  infinita, 

» jo  para  loque  se  t^  '■ 

«quenoh^a^S-  Y  aunquc  podria  ser  mentira  también  podría 

«do^anlesámipo-    g^^.  y^j.^ad  ^  y  gi  ]o  fuCSC  y  UO  SC  pUSÍeSC   luC- 

go  remedio ,  de  poco  habría  servido  la  victoria 
pasada. 

A  tres  plazas  me  paresce  á  mí  que  se  ha- 
bria  de  poner  remedio  este  invierno  muy  ne- 
cesarias: la  una  es  Augusta,  la  cual  según  me 
ha  dicho  el  Sr.  D.  García  piensa  ponérsele:  la 
otra  es  la  Goleta ;  esta  está  muy  mal  si  no  se 
remedía ,  y  el  peligro  en  que  estaba  este  ve- 
rano lo  escribí  á  v.  m.,  aunque  no  tan  largo 
como  pudiera  y  como  conoscí  que  tenia  la  ne- 
cesidad. Pero  pues  está  allá  D.  Luís  de  la  Cue- 
va ,  el  cual  tiene  las  trazas  de  todo  lo  hecho  y 
desiníado,  y  por  haberle  tratado  mucho  lo  tie- 
ne bien  entendido,  podrá  mostrallas  á  v.  m. 


oo 


y  decille  como  se  ha  hecho  mas  peligrosa  aquella  plaza  aho- 
ra que  antes,  y  cuanto  conviene  ponelle  remedio  y  breve, 
que  yo  lo  trate  con  él.  El  remedio  que  se  ha  trazado  de  alar- 
galla  cresciendo  los  baluartes  y  sacándolos  mas ,  no  me  ha 
parescido  bien ,  porque  al  fin  es  remiendo ,  y  por  remiendo 
quedará  como  los  otros  que  se  han  hecho  allí  de  50  años 
á  esta  parte.  La  plaza  es  pequeña  y  los  muros  y  baluartes 
muy  pequeños  y  bajos,  y  no  se  remediará  esto  con  cuan- 
to en  ella  se  haga.  Lo  que  á  mí  me  paresce  es  que  pues  el 
sitio  es  tan  bueno  que  no  puede  ser  mejor  por  mi  parescer 
y  la  plaza  tan  pequeña ,  que  se  quedase  ansí  como  está  por 
i'oqueta  y  se  saliese  á  fuera  á  hacer  nueva  fortificación  bien 
trazada  y  bien  entendida ,  la  cual  yo  baria  de  tierra  y  fagi- 
na por  acaballa  brevemente  como  se  podría  hacer ,  porque 
ansí  la  tierra  como  la  fagina  la  hay  allí  en  abundancia ,  y 
después  con  el  tiempo  se  podría  ir  aforrando  de  piedra,  y  no 
solo  le  abriría  fosos ,  pero  la  baria  isla ,  porque  es  cosa  faci- 
lísima. El  gasto  desta  fortificación  no  seria  mucho  y  por  mi 
opinión  quedará  una  de  las  mejores  fuerzas  del  mundo ,  y 
pues  es  tan  importante,  no  se  habría  de  dejar  de  hacer  lo 
que  es  mejor ,  aunque  para  esto  se  quítase  de  otras  partes, 
y  aun  yo  aseguro  que  siempre  que  á  este  reino  y  al  de  Sici- 
lia se  les  pidiese  ayuda  para  tal  obra  la  diesen  buena  y  de 
buena  gana  por  lo  mucho  que  les  importa ;  y  cuando  desto 
so  tratase  y  se  me  pidiese  parescer  le  daría  mas  extendido. 

La  otra  es  Malta,  la  cual  veo  muy  peligrosa  y  con  difi- 
cultoso remedio,  porque  si  cuando  estaba  mejor  fortificada  y 
sana  y  nueva  la  fortificación  estuvieron  tan  cerca  de  per- 
derse por  el  mal  sitio  que  tienen,  cuanto  mas  lo  estarán  te- 
niéndolo todo  por  el  suelo ,  no  podiéndolo  tornar  á  reparar 
todo  el  poder  del  mundo  en  dos  ni  en  tres  años,  cuanto  mas 
de  aquí  á  cuando  el  armada  podrá  venir.  Yo  digo  que  por 
Tomo  XXX.  5 


34 

mi  opinión  no  solo  no  les  dejaría  gastar  dineros  en  aquel  si- 
tio ,  pero  los  sacaria  del  por  fuerza ,  porque  allí  no  pueden 
esperar  sino  su  perdición  con  infinitos  daños  que  después  ha- 
rán los  turcos  en  la  cristiandad ,  por  lo  cual  ternía  por  muy 
mal  caso  desamparar  á  Malta,  porque  el  enemigo  se  apode- 
raría luego  della ,  y  puesto  allí  el  pié  donde  tiene  tan  buenos 
puertos  y  seguros ,  y  tan  cerca  de  nuestras  tierras  para  ve- 
nir en  nuestro  daño  y  de  las  suyas  para  su  ayuda  y  socorro, 
como  es  Berbería  á  una  parte  y  levante  á  la  otra,  con  tanto 
aparejo  y  tanta  fuerza  como  tiene,  en  poco  tiempo  se  acaba- 
ría de  hacer  señor  de  Berbería  y  de  poner  á  los  reinos  de  Ña- 
póles y  Sicilia  en  todo  el  aprieto  del  mundo :  de  manera  que 
ni  yo  desampararía  á  Malta,  ni  ternía  aquel  sitio. 

De  dos  maneras  me  paresce  á  mí  que  determinándose 
S.  M.  á  ello  se  puede  defender  este  verano  Malta.  La  una 
es,  y  aun  por  mi  opinión  la  mas  segura,  echar  diez  mil  sol- 
dados en  tierra  y  quinientos  caballos ,  y  tomar  delante  la  ciu- 
dad cerca  del  agua  su  sitio  fortificado  y  los  bastimentos  y  mu- 
niciones necesarios  metidos  dentro  la  ciudad  que  ternán  á  las 
espaldas  y  alguna  artillería ,  y  haría  un  fuerte  bueno  sobre 
la  Marza  para  defendelles  el  agua ,  y  otro  en  la  Gala  de  San 
Paulo  para  el  mesmo  efecto ,  porque  si  en  estas  dos  partes 
se  defiende  el  agua ,  no  terna  el  armada  del  turco  ni  su  cam- 
po donde  beber,  y  ansí  no  podrían  saltar  en  tierra  ni  es- 
tar sobre  los  fuertes  que  guardan  el  agua,  por  lo  cual  y  por 
ver  que  los  dichos  fuertes  podrían  ser  socorridos  de  nuestro 
campo  y  por  la  guerra  que  haria  al  suyo  no  osarían  saltar 
en  tierra,  y  si  saltan  no  podrán  hacer  ningún  efecto,  porque 
el  que  podrían  que  seria  fortificarse  en  algún  buen  sitio  que 
guardase  los  puertos,  con  no  tener  que  beber  no  lo  podrían 
hacer.  El  agua  que  el  armada  podria  hacer  en  el  Gozo  no 
,  bastaría  para  el  campo,  cuanto  mas  que  aun  allí  se  podría 


OÜ 


hacer  otro  fuerte,  el  cual  y  los  otros  serian  seguros  por  no 
poder  estar  sobre  ellos,  por  la  falta  del  agua.  Esto  parece 
que  seria  de  mucha  costa  como  en  efecto  lo  es,  mas  á  quien 
tiene  tanta  gente  hecha  siempre  como  S.  M.,  no  le  seria  tan- 
ta costa  como  al  que  la  hiciese  de  nuevo. 

La  otra  manera  seria  fortificando  el  sitio  de  San  Telmo, 
ansí  como  es  el  parescer  de  todos  los  que  algo  entienden  que 
lo  han  visto ,  y  porque  no  se  podria  hacer  de  muralla  en  tan 
poco  tiempo,  se  podria  hacer  de  tierra  y  fagina,  la  cual  se 
ha  de  llevar  de  Sicilia ,  y  echando  dos  ó  tres  mil  gastadores 
lo  podrían  poner  de  aquí  al  mes  de  abril  en  buena  defensa, 
y  con  dos  mil  hombres  que  allí  se  metiesen  y  hacer  los  fuer- 
tes que  arriba  he  dicho  sobre  la  Marza  y  San  Pablo  que  de- 
fendiesen el  agua ,  y  poner  alguna  gente  de  pié  y  de  caballo 
en  la  ciudad  y  algunas  buenas  piezas  de  artillería  que  tam- 
bién defendiesen  el  agua  de  los  jardines  que  están  cabe  la 
ciudad,  me  paresce  á  mí  que  se  defendería  aquella  isla,  la 
cual  por  mi  opinión  es  de  infinita  importancia. 

Bien  podria  excusar,  quien  tan  poco  crédito  y  poca  pru- 
dencia tiene  como  yo ,  tratar  ni  dar  parescer  de  cosas  tan  im- 
portantes á  donde  sobra  la  prudencia ,  y  la  experiencia  y  el 
buen  parescer ;  pero  el  amor  y  buen  celo  que  tengo  al  ser- 
vicio de  S.  M.  me  fuerza  á  hacello,  y  por  una  satisfacción 
mia  y  por  la  mesma  causa  diré  lo  que  me  paresce  acerca  de 
las  muchas  galeras  que  S.  M.  manda  hacer  y  señaladamente 
en  este  reino,  aunque  con  tener  cargo  yo  en  él  dellas,  ni  se 
me  ha  dado  parle,  ni  pedido  parescer,  ni  remitídome  cosa  que 
á  ellas  toque ,  en  lo  cual  conozco  lo  poco  que  sé  y  valgo. 

Yo  siempre  he  seido  y  soy  ahora  de  opinión  que  si  S.  M. 
no  arma  de  buena  boya  ,  no  podrá  jamás  tener  armada  que 
iguale  á  la  de  su  enemigo ,  y  que  armando  de  buena  boya, 
no  solo  podrá  igualalle,  pero  sobralla  sin  crescer  gastos  ante 


oG 

excusando  muchos;  y  porque  desto  el  año  pasado  de  65  di 
á  S.  M.  memorial  en  que  largamente  dije  mi  parescer,  re- 
mitiéndome á  aquello  no  lo  tornaré  á  decir.  Solo  digo  que 
me  paresce,  que  pues  S.  M.  manda  hacer  tantas  galeras  y 
en  tantas  partes  que  debe  ser  con  determinación  de  armar- 
las de  buena  boya,  porque  para  armarlas  de  forzados  no  po- 
dría haber  tantos.  Si  es  ansí  que  quiere  armar  de  buena 
boya ,  como  yo  soy  de  opinión  que  lo  debria  hacer ,  hallarlo 
ha  S.  M.  muy  dificultoso  en  los  primeros  años ,  por  la  mala 
opinión  en  que  están  las  galeras,  y  no  sin  mucha  causa, 
porque  han  seido  en  muchas  deltas  en  estos  y  otros  tiempos 
tomados  muchos  al  sueldo  por  de  buena  boya  y  echados  lue- 
go á  la  cadena  teniéndolos  por  forzados ,  que  aunque  cum- 
plan el  tiempo  de  su  condenación  se  quedan  por  forzados  como 
antes,  teniéndolos  dos,  y  cuatro  y  10  y  20  años,  y  habiendo 
en  esto  tanta  desorden ,  que  tienen  tan  espantada  y  temero- 
sa la  gente ,  que  no  se  hallaría  un  hombre  que  por  su  vo- 
luntad venga  á  servir  de  remero.  Pero  si  se  comenzasen  á 
tomar  algunos  y  los  tratasen  bien,  no  echándolos  á  la  cade- 
na, ni  quitándoles  la  libertad  de  saltar  en  tierra  algunas  ve- 
ces á  buscar  refrescos,  y  acabada  la  jornada  les  pagasen  bien 
y  los  inviasen  contentos ,  que  es  de  la  manera  que  lo  han 
hecho  y  hacen  todos  los  que  arman  de  buena  boya ,  comen- 
zarse hian  á  asegurar  y  venir ,  y  poco  á  poco  en  poco  tiem- 
po estarían  asegurados  y  holgarían  de  venir  á  servir  por  la 
ganancia ,  y  desta  manera  vernían  muchos  por  su  voluntad 
como  á  otro  trabajo ,  y  los  que  se  repartiesen  por  las  tierras 
también  vernían  de  buena  gana ,  y  no  se  huirían  ni  esconde- 
rían como  lo  hacen  agora.  V.  m.  crea  que  esto  es  de  mucha 
importancia  y  que  se  debria  comenzar  luego,  y  si  no  se  ha 
de  hacer  ansí  yo  no  baria  tantas  galeras,  pues  no  han  de 
servir  sino  destarse  en  el  puerto  á  donde  siempre  pierden 


57 

mas  que  si  navegasen  por  la  broma  que  las  come  y  otras  co- 
sas ,  que  es  como  cosa  que  no  se  habila.  Yo  acuerdo  lo  que 
me  paresce:  S.  M.  haga  lo  que  será  servido,  y  v.  m.  me 
perdone  que  he  salido  de  la  determinación  que  tenia  este  ve- 
rano de  servir  en  lo  que  me  mandasen ,  sin  entremeterme  en 
otra  cosa  como  lo  he  hecho  y  como  lo  hiciera  si  me  manda- 
ran servir  en  tierra,  á  lo  cual  me  ofrescí  y  no  quedó  por  mi 
de  hacello  con  cargo  y  sin  él,  y  quizá  no  se  hubiera  perdido 
nada  cuando  se  perdió  tan  buena  ocasión. 

Yo  he  venido  aquí  con  las  galeras  de  mi  cargo  á  pone- 
lias  á  invernar,  y  quisiera  poder  volver  á  besar  las  manos  á 
S.  M.  y  acordalle  los  negocios  que  le  he  suplicado;  pero  hay 
tanto  que  hacer  en  pagar  y  despedir  la  gente  destas  galeras, 
y  en  tomar  las  cuentas  de  los  gastos  pasados  y  en  proveellas 
y  ponellas  en  orden ,  que  me  he  quedado  para  hacello ,  á 
donde  esperaré  la  memoria  que  S.  M.  terna  de  mí ,  que  si 
fuere  la  que  mis  servicios  merescen ,  perseveraré  en  servir 
como  ha  cuarenta  años  que  lo  hago ,  y  si  no  se  acordare 
S.  M.  de  mí  ni  de  mis  servicios,  entenderé  que  valgo  poco 
para  ellos ,  y  así  no  pudiendo  mas  sustentarme  con  tantos 
trabajos  y  deudas,  y  tantos  hijos  y  tantos  años  á  cuestas,  y 
al  cabo  dellos  con  tantos  superiores,  me  iré  á  mi  casa  por  no 
perdella ,  pues  no  la  gané ,  como  la  pierdo  estando  fuera  della 
con  once  pleitos  que  tiene  en  Valladolid,  sin  poder  entender 
en  ellos  ni  ayudalla  por  otro  camino.  Yo  valgo  cada  dia  me- 
nos con  S.  M.,  y  si  ha  de  ser  ansí  antes  que  mas  pierda  en 
hacienda  y  autoridad ,  será  bien  hacer  lo  que  he  dicho ,  lo 
cual  hubiera  hecho  cuando  allá  estuve ,  si  no  fuera  por  la  jor- 
nada que  se  ofreció.  Y  cuando  el  año  pasado  de  63  se  me 
hizo  tan  gran  afrenta  de  quitarme  el  armada  que  yo  traia 
para  dalla  á  Juan  Andrea ,  mandándome  que  le  siguiese  y 
obedeciese ,  tuve  determinado  de  hacerlo ,  y  por  la  otra  jor- 


58 

nada  del  Peñón  que  se  olVcsció ,  lo  dejé  para  hacello  después 
della.  Ya  no  es  tiempo  de  alargallo  mas  de  hasta  ver  la  me- 
moria que  S.  M.  ahora  terna,  que  por  lo  que  veo  de  las  pro- 
visiones hechas,  creo  será  poca,  que  ansí  lo  debo  yo  de  me- 
rescer. 

S.  M.  manda  que  aquí  se  hagan  26  galeras,  de  las  cua- 
les se  han  de  hacer  seis  en  Genova  y  seis  en  el  Citraro ,  una 
tierra  deste  reino,  y  catorce  aquí.  A  mí  no  me  ha  S.  M.  man- 
dado que  entienda  en  cosa  dellas,  siendo  de  mi  oficio  y  anejo 
á  mi  cargo ,  en  lo  cual  conozco  la  poca  cuenta  que  se  hace 
de  mí ;  todavía  no  he  querido  dejar  de  decir  al  visorey  mi 
parescer,  así  en  los  garbos  y  modo  de  hacellas,  como  en 
todo  lo  demás  que  se  ofresce ,  y  ansí  él  me  ha  ordenado  que 
yo  señale  personas  que  lo  entiendan,  y  ponga  una  en  el  Ci- 
traro y  otra  aquí  para  que  vean  como  van  clavadas  y  forti- 
cadas  las  galeras  y  si  es  buena ,  sana  y  sazonada  la  madera 
y  tablas  y  todas  las  otras  cosas,  que  todo  es  muy  importan- 
te ,  y  ansí  las  porné ,  y  holgaría  de  poner  otro  en  las  galeras 
que  se  hacen  en  Genova ,  las  cuales  se  podrán  hacer  y  aca- 
bar allí,  y  armarse  de  marineros  y  de  remeros  de  buena 
boya  hasta  traellos  aquí.  Si  para  entender  en  algo  fuese  bue- 
no, aquí  estoy  aparejado.  Nuestro  Señor,  etc.  De  Ñapóles  8 
de  noviembre  1565. 


Capítulos  de  carta  autógrafa  del  secretario  Vargas  á  don 
García  de  Toledo.  Madrid  5  de  diciembre  de  1565. 

^Archivo  del  Exorno.  Sr,  duque  de  Medinasidonia.) 

Del  buen  suceso  de  la  jornada  de  Malta  no  tengo  que  de- 
cir, pues  sabe  la  parte  de  contentamiento  que  rae  habrá  sido 


59 

por  los  respectos  que  V.  Ex.*  dice  en  su  carta ,  y  porque 
también  se  atajaron  los  que  ya  murmuraban  de  la  dilación, 
á  los  cuales  ha  mostrado  el  suceso  lo  que  vale  la  prudencia 
y  lo  que  sin  ella  se  ofende  la  república  y  el  servicio  de  los 
reyes. 

No  hay  cosa  de  nuevo  de  que  avisar ,  sino  que  me  ha 
parecido  bien  todo  lo  que  V.  Ex.*  scribe  al  Rey  á  propósito 
del  cargo  de  la  mar :  y  no  quedará  por  no  dárselo  bien  á  en- 
tender el  secretario  placiendo  á  Dios. 

El  duque  se  está  aquí :  cada  dia  dice  que  quiere  tomar 
resolución  en  sus  cosas ;  pero  nunca  falta  un  pargamino  que 
le  detiene.  Ruy  Gómez  es  el  gallo,  mayormente  después  que 
faltó  D.  Luis,  del  cual  no  hay  mas  memoria  que  si  nunca 
hubiera  sido. 

Tampoco  la  hay  de  la  ida  de  Flándes ,  aunque  es  bien 
necesaria,  ni  de  la  consulta.  A  nuestro  amigo  Eftiso  aprie- 
tan en  su  visita  mas  de  lo  que  seria  menester  ni  era  razón, 
y  por  aquí  puede  V.  Ex.*  ver  cual  debe  ser  la  persecución, 
pues  le  tienen  algunos  lástima,  aunque  él  tiene  estómago 
para  todo. 


40 


Copia  de  caria  de  D.  Garda  de  Toledo  al  secretario 
Eraso.  10  de  diciembre  de  i 565. 

Le  agradece  el  cuidado  que  ha  tenido  en  enviarle  provisiones 
para  el  buen  éxito  de  la  empresa  de  Malta. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Ille.  Señor  : 

Infinita  causa  tiene  v.  m.  de  holgarse  de  cualquiera  bue- 
na fortuna  que  por  mí  pasa,  porque  puede  tener  por  cierto 
y  segurísimo  que  con  lo  que  con  ella  acrcscentare  de  autori- 
dad y  crédito,  con  tanto  mayor  fuerza  se  empleará  todo  en 
su  servicio ,  y  uno  de  los  gustos  mas  principales  que  yo  he 
tenido  de  estos  sucesos  pasados,  ha  sido  saber  que  v.  m.  y 
su  casa  rescebirian  contentamiento  dellos,  y  pues  es  señor 
de  la  mia  y  de  mi  vida,  justo  es  que  ansí  lo  haga.  Veo  en  lo 
que  S.  M.  me  scribe  en  agradescimiento  de  lo  pasado ,  que 
es  bueno  tener  el  padre  alcalde,  pues  le  hace  v.  m.  decir 
palabras  no  acostumbradas.  Yo  realmente  escribo  verdad  á 
S.  M.,  porque  con  tenelle  contento,  me  paresce  quedar  yo 
gratificado  de  mis  trabajos.  Acuerdóme  muy  bien  que  v.  m. 
dijo  á  S.  M.  en  Barcelona  que  yo  le  servia  sin  intereses  pro- 
pios, y  hágame  Dios  mal  si  v.  m.  le  engañó  en  ello ,  y  cuan- 
do se  pretenden  que  puede  S.  M.  tener  por  muy  cierto  que 
no  se  fundan  en  codicia.  Beso  las  manos  á  v.  m.  por  el  cui- 
dado que  ha  tenido  de  acordar  á  S.  M.  lo  que  en  este  par- 
ticular me  escribe ,  y  si  no  hubieran  llegado  acá  las  provisio- 
nes que  V.  m.  ha  desenterrado  allá  tan  cumplidas,  poco  apro- 
vecharan gobierno ,  ni  deligencia  ni  maña ;  y  la  principal 


41 

gralificacioa  que  yo  querría,  seria  que  se  conosciesen  allá  en 
persona  de  v.  m.  estos  servicios,  como  mas  claramente  se 
vio  el  año  pasado  por  la  porfía  que  v.  m.  tuvo  en  la  empresa 
del  Peñón  y  provisión  que  para  ello  halló ,  y  el  dia  que  yo 
viese  que  hubiese  de  ser  proveído  por  otras  manos ,  prometo 
que  no  estaría  un  dia  mas  en  el  cargo  que  tengo ,  perqué 
bien  sé  como  me  iría  en  él  y  de  la  manera  que  podría  servir. 
Estos  días  he  eslcdo  indispuesto,  agora  estoy  mejor,  aunque 
todavía  me  dura  el  temblor  del  brazo  izquierdo ,  pero  no  me 
da  fastidio.  Dame  mucho  contentamiento  saber  que  v.  m.  tie- 
ne salud:  déla  Dios  á  v.  m.  y  á  su  casa  como  yo  deseo. 


Carta  original  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M.  ,  fecha  en 
Mesina  á  12  de  diciembre  de  1565. 

Le  entera  de  las  provisiones  que  ha  enviado  á  la  Goleta  ,  y  de  la 
cuenta  del  gasto  de  las  galeras — Pedro  Francisco  Doria — D.  Juan 
de  Cardona — El  capitán  Zapata  de  León. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1129). 

S.  C.  R.  M. 

Habiendo  escrito  á  V.  M.  á  los  30  del  pasado,  por  vía 
de  Roma  rescibí  el  despacho  de  V.  M.  de  los  cinco  del  mismo 
en  tres  del  presente,  y  beso  los  píes  á  V.  ^I.  por  el  conten- 
tamiento que  muestra  tener  deste  servicio  pasado;  y  la  afición 
con  que  se  ha  hecho  y  se  harán  por  los  venir ,  es  la  que  me 
parece  tener  algún  mérito,  del  cual  me  tengo  por  remune- 
rado, pues  he  sacado  el  principal  interese  que  yo  pretendo 
de  mis  trabajos ,  que  es  dar  á  V.  M.  satisfacción  con  ellos, 


42 

y  cuanto  han  sido  de  mayor  importancia ,  tanto  mas  pagado 
y  remunerado  quedo  dellos. 

La  orden  de  V.  M.  sobre  el  añadir  de  gente  á  Ñapóles  y 
Lombardía  quisiera  que  llegara  antes  que  hubiera  partido  la 
que  fué  á  Gerdeña.  Una  compañía  que  quedó  en  Ñapóles  de 
aquellas ,  escribiendo  yo  al  virey  que  la  podia  detener  allí  si 
le  paresciese,  no  la  quiso  tomar,  y  ansí  fué  necesario  en- 
viarla en  Gerdeña ,  porque  aquí  ya  detuve  el  número  que 
aun  con  trabajo  puedo  sustentar ,  y  con  la  que  ha  de  venir 
de  la  Goleta  creo  que  serán  hasta  dos  mil  soldados.  Gomo 
aquellos  lleguen ,  que  estos  y  ellos  están  en  bajo  de  hartos  ca- 
pitanes, la  reformaré  y  reduciré  este  número  en  bajo  de  diez 
compañías  como  lo  tengo  escrito  por  mis  despachos  pasados. 
Escribiré  al  virey  de  Ñapóles  que  vea  qué  gente  ha  menester 
para  rehacer  la  suya  y  llegarla  al  número  que  V.  M.  manda 
de  los  cuatro  mil  y  quinientos ,  y  la  que  me  demandare  con 
la  primera  ocasión  de  galeras  se  la  enviaré  al  reino,  lo  mismo 
haré  con  D.  Gabriel  en  observancia  de  lo  que  V.  M.  manda, 
y  la  que  sobrare,  si  fuere  mas  de  doscientos  ó  trecientos  hom- 
bres, quedará  allá,  y  si  no  se  repartirá  como  V.  M.  manda. 
Y  en  la  Goleta  quedarán  las  dos  compañías  que  V.  M.  or- 
dena ,  pues  es  muy  bien  que  allí  haya  gente  útil  y  para  ser- 
vir, y  que  se  despidan  los  que  no  lo  son. 

Los  oficiales  fueron  con  la  gente  á  Gerdeña  como  V.  M. 
manda  y  fueron  pagados  de  lo  que  debían  de  haber,  y  lo 
mismo  se  hará  con  Orozco  que  quedó  aquí  malo,  al  cual  he 
mandado  que  vaya  á  ejercitar  su  cargo. 

Ya  he  escrito  á  V.  M.  lo  que  se  me  manda ,  que  es  que 
diga  mi  parescer  en  lo  que  se  puede  hacer  este  verano  que 
viene ,  y  no  ocurriéndome  otra  cosa  me  remitiré  á  ello.  Y  la 
provisión  que  V.  M.  manda  hacer  para  la  Goleta  es  de  grande 
importancia  si  hay  tiempo  para  ponella  en  defensa ,  y  no  ha- 


45 

biéndolo  no  me  paresce  que  es  bantante  para  quedar  V.  M. 
quieto ,  paresciéndole  que  con  estarse  fortificando  queda  lo  de 
allí  á  recaudo  ;  y  tiene  V.  M.  grande  razón  de  desear  que 
aquello  se  ponga  de  una  vez  en  tal  estado  y  término  que  no 
ande  dando  cada  año  tanto  gasto  y  fastidio.  Y  certifico 
á  V.  M.  que  por  verlo  remediado  iria  yo  á  servir  de  gastador 
si  para  ello  valiese  algo,  y  en  los  que  aquí  se  han  de  levantar 
y  en  las  demás  pro\isiones  que  V.  M.  manda  no  habrá  nin- 
guna falta ,  y  en  viniendo  el  ingeniero  se  ejecutarán ,  y  en 
este  medio  se  irá  haciendo  la  provisión  de  la  cal ,  porque 
según  lo  que  pasa  en  Túnez,  como  V.  M.  verá  por  la  relación 
que  D.  Alonso  rae  envía,  no  creo  que  tendrá  allí  muy  buen 
recaudo ,  y  aunque  creo  que  él  la  habrá  enviado  me  ha  pa- 
rescido  duplicarla  con  esta,  y  proveí  estos  dias  que  se  envia- 
sen allí  dos  mil  salmas  de  trigo,  y  la  cebada  que  escribí  á 
V.  M.  Agora  he  mandado  que  vayan  otras  dos  mil  por  cuenta 
de  la  Goleta;  y  suplico  áV.  M.  que  precisamente,  pues  sabe 
la  gente  que  allí  hay ,  me  mande  el  trigo  y  cebada  que  he 
de  dar  á  aquella  fuerza  cada  año,  porque  con  esto  excusaré 
que  acabando  de  enviar  trigo  me  lo  envíen  de  nuevo  á  pedir, 
y  esla  provisión  procuraré  que  siempre  la  tengan  un  año  an- 
ticipada ,  con  lo  cual  ellos  estarán  bien  proveídos  y  yo  des- 
cansado. 

Y  porque  no  sabiendo  V.  M.  el  dinero  que  acá  se  podia 
haber  gastado ,  ha  sido  forzado  hacer  la  provisión  que  se  ha 
hecho  de  que  Adam  Centurión  tome  á  cambio  los  cincuenta 
y  seis  mil  ducados  para  las  cosas  de  la  Goleta,  me  ha  pares- 
cido  creyendo  (aunque  no  lo  sé  cierto  que  sobrará  dinero) 
screbir  á  Adam  Centurión  que  no  tome  á  cambio  sino  los  doce 
mil  escudos  que  han  de  ir  á  Lombardía  para  pago  de  los  tu- 
descos ,  y  escribo  al  embajador  que  los  cincuenta  y  seis  mil 
escudos  los  lome  de  los  cient  mil  que  V.  M.  me  remitió  úl- 
timamente ,  que  con  los  que  quedaren  pienso  cumplir  con  el 


44 

gasto  desle  verano ,  y  para  que  lo  haga  ansí  despacho  este 
correo ,  y  habiendo  de  ir  con  esta  orden  hasta  la  meitad  del 
camino,  he  querido  que  pase  con  los  despachos  que  lleva, 
en  que  doy  cuenta  á  V.  M.  de  todo  lo  que  hasta  hoy  me  tiene 
mandado. 

A  D.  Juan  de  Villarroel  se  ha  dicho  lo  que  V.  M.  manda 
sobre  la  averiguación  de  las  galeras  que  ha  tenido  V.  M.  á 
su  cuenta  en  Ñapóles  y  Sicilia ,  y  mandaré  que  de  lo  que  toca 
á  este  reino  se  haga  también,  y  escribiré  á  D.  Sancho  para 
que  de  allí  se  envíe  la  claridad ,  y  si  no  me  acuerdo  mal  las 
de  Florencia,  que  habrá  este  mayo  que  viene  dos  años  que 
sirven ,  también  quiso  V.  M.  que  entrasen  á  cuenta  de  las 
cuarenta,  y  este  verano  han  estado  aquí  armadas  cinco  ó 
seis,  aunque  por  pocos  meses,  por  cuenta  de  V.  M.;  pero 
como  cesó  el  haber  de  combatir  por  mar ,  porque  las  hice 
luego  desarmar,  han  quedado  sus  adrezos  y  arreos  en  orden 
para  otra  ocasión ,  y  este  gasto  se  ha  hecho  por  cuenta  del 
reino.  V.  M.  podrá  ver  si  del  se  ha  de  valer  allá,  y  si  me 
engañare  en  esto  daré  aviso  á  V.  M. 

En  lo  que  toca  á  las  galeras  ce  Adam  Centurión ,  tengo 
escrito  á  V.  M.  que  mi  parescer  es  que  se  comprasen,  y  ansí 
torno  á  confirmar  lo  mismo  á  V.  M.  y  lo  demás  que  sobre 
esta  materia  tengo  escrito;  y  V.  M.  crea  cierto  que  si  todas 
las  galeras  son  suyas ,  que  gastará  mucho  menos  sin  que  en 
su  servicio  y  en  Iraellas  también  en  orden  haya  falta,  porque 
el  año  que  no  hubiere  armada ,  la  cual  ocasión  forzará  á  sa- 
carlas todas  y  las  demás  que  hubiere  en  las  atarazanas  para 
perseguir  los  cosarios ,  bastará  la  meitad  ó  las  dos  partes 
de  las  que  V.  M.  sustenta,  y  las  otras  podrán  quedar  en  el 
puerto,  valiéndome  de  las  chusmas  para  las  que  navegaren, 
y  en  las  que  quedaren  se  ahorrará  de  las  cuatro  partes  las 
tres  del  sueldo. 

Scríptome  ha  Juan  Andrea  dende  Ñapóles  que  de  la  for- 


tuna  que  su  hermano  corrió  partiendo  de  Palermo  con  las 
galeras ,  con  las  cuales  él  no  pudo  ir  por  quedar  aquí  toman- 
do el  agua  del  palo,  no  páresela  una,  la  mejor  que  él  tenia, 
la  cual  tenia  por  cierto  que  era  perdida ,  y  no  habiendo  com- 
parescido  por  allá  ni  yo  haber  sabido  por  acá  nueva  della, 
creo  sin  duda  que  debe  haber  sido  ansí,  y  certifico  á  V.  M. 
que  yo  siento  en  el  ánimo  cualquier  desgracia  que  le  acaez- 
ca, porque  él  sirve  de  manera  que  cualquiera  debe  desear 
ver  acrescentadas  sus  cosas,  tanto  mas  yo  que  veo  de  la  ma- 
nera que  las  emplea  en  servicio  de  V.  M.  Esta  misma  des- 
gracia tuvo  el  príncipe  Andrea  Doria  su  lio,  que  en  el  tiem- 
po que  sirvió  perdió  gran  cuantidad  dellas ;  pero  tuvo  gran 
dicha  en  servir  á  príncipe  que  con  diversas  mercedes  le  re- 
muneró sus  pérdidas ;  y  pues  Juan  Andrea  se  halla  en  este 
mismo  estado,  suplico  á  V.  M.  le  haga  tal  merced  con  que  él 
pueda  remediar  sus  daños ,  y  en  las  que  le  quedaron  tam- 
bién ha  padescido  gran  interese  de  lo  que  sus  marineros  echa- 
ron á  la  mar. 

Hánme  escrito  que  V.  M.  quiera  hacer  merced  á  Apari- 
cio de  Ugarte  de  dos  galeras ,  y  veo  que  agora  se  dilata ,  ó 
por  poner  el  impedimento  en  la  venida  ó  por  haberle  pares- 
cido  á  V.  M.  otra  cosa.  El  Aparicio  es  hombre  para  servir, 
y  ansí  suplico  á  V.  M.  le  mande  hacer  venir,  y  de  manera 
que  él  se  pueda  entretener. 

V.  M.  crea  que  este  cargo  de  la  mar  es  trabajosísimo  por 
infinitos  respectos ,  y  si  no  hay  muchas  personas  que  sepan 
servir  en  lo  que  se  les  manda ,  no  pudiendo  yo  en  todo  po- 
ner las  manos,  no  puede  V.  M.  ser  bien  servido,  y  en  esta 
necesidad  pasada  he  visto  bien  la  falta  que  en  esto  hay ,  y 
cuando  entré  en  el  cargo  habia  falta  de  personas  y  agora  la 
hay  mayor  con  la  muerte  del  marqués  de  Estepa  y  de  D.  Fa- 
drique  de  Carvajal.  Hay  en  Genova  un  sobrino  de  D.  Anto- 


46 

nio  Doria  que  le  gobernó  sus  galeras  muchos  años,  que  se 
llama  Pedro  Francisco  Doria;  es  muy  platico  y  muy  cuerdo,  y 
con  tener  tres  mil  ducados  de  renta  en  Genova  no  querrá  sa- 
lir de  allí  sino  con  buen  entretenimiento.  Suplico  á  V.  M.  sea 
servido  de  dárselo  para  que  venga  á  servir  á  V.  M.  en  mi 
presencia.  No  creo  que  se  le  pueden  dar  menos  de  ciento  y 
cincuenta  ducados  al  mes,  y  no  será  poco  sacarle  con  ellos. 
Si  para  ahorrar  los  ciento  quisiere  V.  M.  darle  dos  galeras, 
que  aunque  se  den  otras  dos  á  Aparicio ,  no  escederán  del 
número  de  los  cuatro  capitanes  que  las  han  de  tener  de  dos 
en  dos,  suplicaría  á  V.  M.  que  mandase  darme  otras  dos 
personas ;  pero  dejólo  por  no  saberlas  nombrar  de  la  prática 
y  experiencia  que  convienen  para  el  servicio  de  V.  M. 

Las  galeras  de  Sicilia  deste  reino  que  están  á  cargo  de 
D.  Juan  de  Cardona,  las  he  puesto  en  bajo  del  asiento  que 
están  las  que  yo  tengo  á  cargo,  y  porque  D.  Juan  pretende 
y  con  razón  que  se  le  han  de  dar  las  presas  por  la  forma  de 
las  de  España  y  Ñapóles,  y  aunque  tiene  justicia,  he  queri- 
do primero  escribirlo  á  V.  M.  para  que  vea  si  manda  que  se 
haga  con  él  ansí. 

El  capitán  D.  Francisco  Zapata  de  León  sirvió  muy  bien 
á  V.  M.  en  el  Peñón  y  lo  mismo  ha  hecho  en  esto  de  Malta, 
en  todo  lo  que  se  le  ha  ofrescido ,  como  mas  particularmente 
lo  escribo  á  V.  M.  en  otra  mia  que  él  lleva.  Rescibiré  par- 
ticular merced  en  que  V.  M.  se  la  mande  hacer ,  porque 
cierto  la  meresce  y  es  muy  apto  para  servir  en  cualquiera 
cosa  que  se  le  encomiende.  Y  Nuestro  Señor  guarde  la  vida 
de  V.  M.  por  largos  años  como  la  cristiandad  ha  menester. 
De  Mesina  á  12  de  diciembre  1565. — Criado  y  vasallo  de 
V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa.  —  Don  García  de 
Toledo. 

Sobre. — A  la  S.  C   R.  M.  del  Rey  nuestro  señor. 


47 


Caria  original  del  duque  de  Alba  á  D.  García  de  Toledo. 
Madrid  30  de  diciembre  de  1565. 

Le  dice  la  infantería  que  piensa  enviar  el  rey  á  la  Goleta  y  á  Malta, 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidom'a.) 

Muy  Ille.  Señor  : 

Tengo  tan  gran  contentamiento  de  las  facciones  que  V.  S. 
ha  hecho  este  verano  pasado  que  no  sabria  encarescerlo,  y 
asi  le  juro  como  caballero  y  por  todo  lo  que  puedo  jurar  que 
si  D.  Fadrique  mi  hijo  las  hubiera  hecho  que  no  le  tuviera 
mayor  ni  aceptara  con  mayor  voluntad  el  parabién  que  me 
han  dado ,  de  que  estoy  tan  ufano  como  es  razón  de  la  que 
tengo.  S.  M.  salió  de  aquí  á  tener  su  pascua  en  Nuestra  Se- 
ñora de  Esperanza  y  de  allí  fué  al  Escurial,  y  me  mandó 
venir  aquí  á  despachar  lo  que  se  ha  de  hacer  este  verano  en 
Malta  y  la  Goleta  y  otros  muchos  negocios  en  que  se  queda 
entendiendo,  y  habiendo  de  pasar  lo  principal  y  mas  impor- 
tante de  todo  por  las  manos  de  V.  S.  me  ha  parescido  con  la 
ocasión  de  este  correo  enviarle  el  memorial  que  será  con 
esta  (i)  para  que  en  tanto  que  el  despacho  llega  pueda  V.  S. 
ganar  tiempo  y  haber  visto  lo  que  se  puede  enmendar,  y  asi- 
mismo tener  hechas  las  pre\  enciones  que  conforme  á  lo  que 
aquí  diré  serán  necesarias  para  que  cuando  pueda  V.  S.  es- 
cribir á  S.  M.  que  tiene  ya  proveída  la  mayor  parte  de  aquello 
que  se  le  ordena.  Quiere  S.  M.  poner  en  Malta  tres  mili  in- 
fantes á  su  costa  pagados  por  todo  el  tiempo  que  durare  la 

(1)  No  está. 


46 

necesidad ;  los  mili  españoles  viejos ,  y  los  dos  mili  alemanes; 
para  los  cuales  será  necesario  que  desde  luego  mire  V.  S. 
que  cabo  se  les  podria  dar  para  que  con  su  parescer  se  haga. 
Quiere  asimismo  darles  veinte  y  cinco  ó  treinta  mili  ducados 
para  pagar  los  gastadores  y  otras  herramientas  que  serán 
menester  para  lo  que  se  dice  en  el  memorial.  Darles  ha  tam- 
bién diez  mili  ducados  para  pólvora ,  mecha ,  plomo  y  otras 
municiones,  y  otros  diez  mili  para  victuallas,  que  me  pa- 
resce  uu  socorro  harto  gallardo ,  el  cual  se  hará  con  toda 
brevedad ,  y  se  queda  haciendo  el  cambio  para  Genova ,  re- 
mitido á  la  disposición  de  V.  S. 

Hale  parescido  que  estando  la  Goleta  en  el  estado  que 
está,  seria  imposible  poderse  defender ,  ni  resistir  á  la  ar- 
mada ,  y  tiene  determinado  antes  que  salga  acampar  doce 
mili  infantes  y  alojarlos  en  los  Pozos ,  de  manera  que  vengan 
á  tomar  la  monlañeta  de  las  Botas  y  la  montaña  donde  alo- 
jaban los  españoles  bisónos.  Los  cinco  mili  destos  serán  espa- 
ñoles viejos,  y  los  tres  mili  alemanes  y  los  cuatro  italianos. 
Será  necesario  que  desde  luego  piense  V.  S.  en  la  persona 
ó  personas  que  podrán  levantar  estos  italianos  porque  se  le 
envíe  despacho  en  blanco ,  y  que  asimismo  mande  hacer  pro- 
visión de  harinas  y  bizcochos  y  de  todas  las  demás  cosas  ne- 
cesarias á  la  provisión  desta  gente,  y  que  mire  qué  persona 
podria  quedar  por  cabo  de  toda  ella ,  para  que  si  al  recibir 
de  la  carta  de  V.  S.,  S.  M.  no  estuviere  resuelto,  pueda  yo 
tanto  mejor  encaminar  la  que  á  V.  S.  le  paresciere.  Yo  he 
querido  advertirle  desto ,  así  para  que  se  gane  tiempo  en  lo 
que  se  ha  de  hacer,  como  para  que  S,  M.  entienda  que  Y.  S. 
tiene  el  cuidado  que  es  razón.  En  Alba  tiene  salud  la  duquesa 
y  María.  Ahí  van  cartas  suyas  á  que  me  remito.  Y  Nuestro 
Señor  guarde  y  acresciente  la  muy  Ule.  persona  de  V.  S. 
como  desea.  De  Madrid  á  50  de  diciembre  de  1565. 


49 

También  mande  V.  S.  mirar  lo  que  será  menester  de 
pólvora ,  mecha ,  plomo  y  oirás  cosas  para  los  que  habrán 
de  entrar  en  la  Goleta. 

De  SH  letra. 
A  servicio  de  Y.*"  S.  —El  duque  de  Alba. 


Cojiia  de  un  capitulo  de  carta  del  comendador  Bonínsegni 
para  el  gran  maestre.  31  de  diciembre  de  i 565. 

Sobre  la  guarnición  y  defensa  de  Malta. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Xegociado  de  Estado,  legajo 
nüm.  1130.^ 

Para  S.  H. 

Anteayer  sábado  se  tuvieron  dos  consejos  de  guerra,  y 
al  salir  del  consejo  me  llamó  el  duque  de  Alba  y  me  dijo: 
por  la  relación  de  Ascanio  de  la  Gorna  y  vuestra  hemos  visto 
que  por  este  año  se  puede  tener  poca  esperanza  en  los  mu- 
ros de  Malta,  y  que  la  fuerza  ha  de  ser  de  gente.  Ascanio 
ha  sido  de  parecer  que  con  seis  mil  hombres  se  puede  en- 
tretener algunos  dias  el  enemigo,  poniendo  la  mayor  parte 
desta  gente  fuera  del  Burgo ,  en  la  montaña  de  Santa  Mar- 
garita y  todos  aquellos  poxios  eminentes ,  á  donde  el  enemi- 
go tenia  su  artillería,  y  esto  para  dar  tiempo  al  tiempo,  y 
que  los  nuestros  puedan  gozar  mas  dias  del  agua  del  Burgo, 
y  San  Miguel  y  Santangel.  Yo  les  he  puesto  dificultad  en  el 
poco  tiempo  que  hay  para  hacer  la  trinchera  y  en  el  agua. 
Ellos  se  resuelven  en  esto  que  S.  M.  da  para  ayuda  á  la  de- 
ToMO  XXX.  4 


50 

fensa ;  dos  mií  alemanes ,  mil  españoles  de  Lombardía ,'  que 
son  los  mejores  que  el  rey  tiene,  y  que  darán  50  mil  duca- 
dos en  esta  manera;  10  mil  al  virey  de  Ñapóles  para  muni- 
ciones, y  10  mil  al  Sr.  D.  García  para  vituallas,  y  que  es- 
tos se  expenderán  por  orden  de  los  vireyes,  y  V.  S.  111.""" 
podrá  enviar  á  decir  en  lo  que  quiere  que  se  gasten  hasta 
este  número,  y  los  30  mil  se  darán  á  V.  S.  111.™''  para  que 
se  gasten  en  las  fábricas.  Yo  les  he  dicho  que  la  gente  es 
poca,  y  sobresté  diré  á  V.  S.  III. ™^  lo  que  pasa.  Antes  de  la 
muerte  del  papa  ellos  hablan  hecho  desiño  que  en  esta  Irin- 
chea  entrasen  seis  mil  hombres ,  tres  mil  italianos  que  daba 
el  papa,  y  dos  mil  alemanes  y  mil  españoles  que  daba  S.  M. 
Muerto  el  papa,  yo  hablé  al  duque  y  le  dije:  señor,  con  esta 
muerte  de  Su  Santidad  tengo  por  dificultosos  estos  tres  mil 
soldados  italianos ,  que  hasta  en  esto  nos  ha  hecho  daño  la 
muerte  del  papa.  El  duque  me  respondió :  no  dejará  de  dallos 
el  papa  que  viniere,  Respondllc :  y  si  estuviesen  cuatro  me- 
ses sin  hacer  pontífice,  ¿quién  los  dará?  En  el  consejo  de  la 
mañana  estuvieron  resolutos  de  dar  todos  seis  mil  hombres, 
y  en  el  de  la  tarde  se  resolvieron  al  contrario  de  no  dar  mas 
de  los  alemanes  y  españoles.  Yo  dije  al  duque  que  eran  muy 
pocos.  Acá  echan  que  habrá  dentro  de  Malta  ocho  mil  hom- 
bres, seis  que  dará  el  papa  y  el  Rey  y  dos  mil  que  pagará  la 
la  religión ;  y  pues  con  este  año  se  sale  de  trabajo  en  lo  que 
toca  á  la  spesa  do  tanta  gente,  V.  S.  111."*  haga  estos  dos 
mil  que  le  cumple ,  y  cueste  todo  lo  de  todos ,  y  no  quede 
apóstol. 

El  duque  de  Alba  es  de  parecer  que  lo  que  toca  á  la  fren- 
te de  San  Telmo  que  no  se  hiciese  fortificación  real ,  sino 
á  forfiee  como  está  San  Telmo.  V.  S.  hará  lo  que  fuere  servi- 
do. Yo  no  seria  de  tal  parecer,  porque  seria  para  lo  de  ade- 
lante perder  tiempo  y  dineros,  y  cuanta  mas  necesidad  V.  S. 


51 

tuviere,  mas  le  socorrerá  con  gente.  V.  S.  111.°"  comience 
luego,  y  lo  que  tocare  se  ponga  por  obra  que  vea  el  mundo 
que  echa  mano  al  trabajo  el  caballero  y  el  comendador,  que 
el  mundo  está  de  manera  que  con  hacer  el  débito  y  vencer, 
es  menester  andar  dando  satisfacciones.  V.  S.  avise  luego 
si  el  papa  ó  el  colegio  no  diere  gente,  y  comience  su  fábrica 
y  haga  sus  dos  mil  hombres ,  que  como  el  papa  no  diere 
nada  aquí  será  fuerza  que  caminen ,  que  yo  tengo  por  cierto 
que  quieren  tentar  á  ver  lo  que  hace  el  papa,  que  les  pare- 
ce que  para  hacer  italianos  siempre  serán  á  tiempo,  porque 
se  harán  en  breve.  En  Madrid  xxxi  de  xbre.  15G5. 

Carla  original  del  secretario  Francisco  de  Eraso  á  D.  Gar- 
cía de  Toledo.  Madrid  51  de  diciembre  de  4565. 

Le  escribe  los  preparativos  de  gente  y  dinero  que  se  hacían  para 
guarnecer  la  Goleta  y  Malta  y  otros  puntos. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medhiasidonia. ) 

Muy  Ille.  Señor: 

Con  un  criado  del  conde  de  Módica  que  partió  de  aquí 
habrá  15  dias,  di  aviso  á  V.  S.  del  rescibo  de  sus  cartas  de 
19  de  octubre  y  de  los  demás  despachos  que  para  S.  M.  vi- 
nieron ,  á  que  responderá  con  un  correo  que  brevemente  se 
despachará  á  V.  S.  y  con  la  resolución  de  lo  que  parece  se 
debe  proveer  y  prevenir  este  verano,  en  que  se  va  mirando 
y  platicando,  porque  según  los  avisos  que  han  venido,  aun- 
que V.  S.  terna  los  mas  ciertos,  la  armada  turquesca  bajará 
mas  poderosa  quel  año  pasado  y  se  anticipará.  Y  lo  que  ante 
todas  cosas  ha  parescido  ordenar,  es  que  se  levanten  y  Irai- 


52 

gan  desde  luego  Ires  mili  alemanes  á  Ñapóles  y  otros  tantos 
á  Lombardía,  por  ser  en  lo  que  mas  dilación  y  embarazo 
suele  haber  y  lo  mas  sustancial  para  cualquier  efecto  la  gen- 
te que  en  aquellos  presidios  está ;  y  así  se  despacha  ese  cor- 
reo á  esto  y  lo  demás  que  V.  S.  verá  por  lo  que  se  le  scribe, 
á  que  me  remito.  Y  porque  en  la  pasada  fui  breve,  satisfa- 
ré aquí  á  algunos  puntos  de  la  última  carta  que  de  V.  S. 
tengo. 

He  visto  el  capítulo  que  V.  S.  me  envía  de  lo  que  á  S.  M. 
scribe  por  via  de  Vargas  en  lo  de  la  provisión  de  los  capita- 
nes de  galeras.  Y  háceme  V.  S.  mucha  merced  de  darme 
parte  de  estas  cosas  y  las  demás  que  tocaren  á  su  servicio, 
pues  nadie  ha  de  responder  á  ellas  con  mas  voluntad  y  lla- 
neza ,  y  así  informé  á  S.  M.  de  lo  que  en  este  artículo  se  tra- 
tó y  paresció ,  y  de  lo  que  á  su  propio  servicio  convenia  dar 
mano  y  autoridad  á  V.  S.  para  servirle  en  este  cargo ;  y  en 
las  cosas  de  esta  calidad  que  se  proveyeren  y  ordenaren  con 
mi  sabiduría ,  V.  S.  crea  que  terne  muy  de  veras  la  mano 
para  procurar  que  no  se  haga  novedad. 

A  las  galeras  que  se  hacen  en  Cataluña  se  da  toda  la 
prisa  posible;  y  el  maestro  que  V.  S.  envió  está  ya  allí,  y 
al  duque  de  Francavila  se  escribirá  tenga  cuenta  con  él ,  y 
que  no  se  hagan  por  otra  mano,  ni  haya  otra  traza  sino  la 
([ue  diere,  pues  V.  S.  le  ha  ordenado  de  la  manera  que  han 
de  ir  y  es  tan  buen  oficial. 

Ya  acá  teníamos  aviso  y  aun  copias  de  lo  que  el  maes- 
tre scribió  á  Su  Santidad  dándole  las  gracias  por  lo  del  so- 
corro de  Malta,  y  pareció  harto  mal;  pero  S.  M.  holgó  mu- 
cho de  entender  las  particularidades  que  sobresto  me  scribió 
habían  pasado  cuando  allí  estuvo,  de  que  le  hice  relación. 
Y  sin  mirar  á  la  poca  consideración  que  en  esto  tuvo ,  sino 
á  la  importancia  que  para  la  cristiandad  es  la  defensa  y  con- 


53 

servacion  de  Malta,  ha  tenido  S.  M.  por  bien  de  ayudar  y 
socorrer  con  dos  mil  ducados  para  la  fortificación  y  vituallas 
de  allí  y  con  alguna  gente,  y  con  el  correo  que  como  digo 
se  ha  de  despachar  á  V.  S.  irá  el  recaudo  dello. 

Yo  di  cuenta  á  S.  M.  de  lo  que  V.  S.  me  scribe  cerca 
de  la  diligencia  que  hizo  con  el  señor  cardenal  Pacheco  y  él 
con  Su  Santidad  sobre  la  concesión  del  segundo  quinquenio 
de  las  gabelas,  que  no  dudo  sino  que  aprovechara  mucho  si 
viviera;  y  S.  M.  rae  mandó  diese  á  V.  S.  de  su  parte  las 
gracias  por  ello.  Plegué  á  Dios  que  ahora  nos  dé  el  pontífice 
ques  menester  para  lo  de  la  religión  y  para  que  en  estas  co- 
sas no  haya  tanto  embarazo  como  hasta  aquí ,  queslando  las 
de  S.  M.  y  su  hacienda  tan  estrechas  y  siendo  los  gastos  tan 
crecidos,  no  puede  pasar  sin  ayuda. 

También  he  acordado  á  S.  M.  lo  que  V.  S.  scribe  en  lo 
del  crescimiento  del  sueldo  del  señor  conde  de  Altamira,  y 
hasta  ahora  no  ha  tomado  resolución;  pero  haré  todo  lo  po- 
sible para  endereszarlo  como  V.  S.  lo  manda.  Cuyas  manos 
beso  muchas  veces  por  el  cuidado  que  tiene  de  lo  de  mi  vi- 
sita ,  la  cual  creo  se  acabará  presto ,  que  lo  deseo  harto, 
porque  otra  ninguna  cosa  sino  la  dilación  no  me  puede  dar 
pena ,  pues  se  han  de  conocer  las  ruines  intenciones  que  ha 
habido  y  lo  que  yo  he  servido  y  trabajado.  SS.  MM.  y  A  A. 
quedan  buenos  gracias  á  Nuestro  Señor ,  y  la  reina  dicen 
questa  preñada.  Lo  que  importa  que  Dios  le  diese  un  hijo. 
.Múmbrela  Dios  con  bien ,  y  guarde  y  acreciente  la  muy  ilus- 
tre persona  y  estado  de  V.  S.  como  desea.  De  Madrid  31  de 
diciembre  1565. 

De  su  letra. 

Platicado  y  consultado  está ,  que  se  levanten  este  año 
hasta  treinta  mU  infantes ,  y  que  dellos  queden  tres  rail  ale- 


54 

manes  en  Ñapóles ,  tres  mil  en  Lombardía ,  dos  mil  en  xMal- 
ta  y  tres  mil  para  la  Goleta.  En  esta  plaza  se  han  de  poner 
doce  mil  infantes  demás  de  la  gente  ordinaria  que  hay.  En 
Malta  seis  mil,  demás  de  los  dichos  dos  mil  alemanes,  mil  es- 
pañoles viejos  y  tres  mil  italianos.  Iláse  de  sacar  de  Ñapóles 
y  Lombardía  la  infantería  que  hay  en  aquellas  provincias. 
Hánse  de  poner  gentes  en  Cerdeña,  en  Mallorca  y  Menorca, 
en  Oran  y  Mazarquivir  y  en  la  costa  destos  reinos  y  en  las 
galeras ;  con  todo  lo  cual  se  hace,  porque  se  han  de  juntar 
los  dichos  treinta  mil  hombres  en  que  entrarán  los  de  Ñapo- 
íes,  Lombardía  y  los  que  hay  en  ese  reino  y  en  Cerdeña,  y 
que  será  menester  cada  mes  de  paga  ciento  cincuenta  mil 
ducados  por  lo  menos,  que  en  seis  que  se  tardarán  en  jun- 
tar y  volver  á  los  presidios  montarán  nuevecientos  mil  du- 
cados; y  en  pólvora,  municiones  y  vituallas  y  otros  aderes- 
zos  otros  doscientos  mil,  y  los  cambios  mas  de  trescientos. 
Mire  V.  S.  lo  mucho  que  es  menester  proveerse,  y  lo  que 
nos  costarán  los  cambios,  y  por  esto  V.  S.  y  el  señor  visorey 
de  Ñapóles,  para  cuyo  efecto  se  despacha  este  correo,  deben 
hacer  todo  lo  posible  por  ayudar  allá  con  alguna  buena  suma, 
que  de  acá  según  lo  que  gastamos  el  año  pasado ,  harto  ha- 
brá que  hacer  en  dar  alguna  parte.  El  señor  duque  Dalba  es- 
cribe á  V.  S.  largo  sobre  estas  cosas,  entretanto  que  viene 
S.  M.  y  se  despacha  este  correo,  para  que  V.  S.  esté  preve- 
nido. Y  lo  de  las  vituallas  para  la  Goleta,  así  para  la  gente  or- 
dinaria como  para  la  extraordinaria,  debe  V.  S.  prevenir,  y 
si  se  pudiere  hacer,  comenzar  á  comprar.  Y  lo  de  Malta  im- 
porta nmcho  que  asimismo  se  provea,  y  V.  S.  nos  avise  de 
todo  lo  que  le  ocurriere,  porque  mejor  acertemos.  Mi  sobri- 
no no  ha  llegado;  creo  que  verná  con  Juan  Andrea. 

Besa  las  manos  á  V.  S.  su  cierto  servidor,  Francisco  de 
Eraso. 


55 

Sobre. — Al  muy  Ule.  señor  mi  señor  D.  García  de  Tole- 
do, visorey  de  Sicilia  y  general  de  la  mar. 

CárCá  órtfjTndl  del  gran  maestre  á  D.  Felipe  II,  fecha  en 
Malta  á  8  de  enero  de  1566. 

Pídele  fuerzas  para  defender  á  Malta  contra  la  pujanza  del  tur- 
co, ó  un  lugar  en  Sicilia  para  retirarse  á  él  los  caballeros. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado  ,  legajo  núm.  1451.) 
S.  Cat."  Mu.** 

Por  mis  cartas  de  11  y  13  de  setiembre,  y  por  las  que 
llevó  con  data  de  18  del  mesmo  el  comendador  Boninsene  y 
de  su  relación  á  boca  habrá  entendido  V.  M.  el  suceso  del 
sitio  en  que  nos  ha  tenido  larmada  del  turco ,  y  después  con 
el  conde  Brocardo  traté  y  llevaba  creencia  mia  para  que  pla- 
ticase con  V.  M.  el  recelo  que  yo  tenia  que  el  turco  por  es- 
tar mal  vezado  de  que  le  salgan  aviesos  sus  intentos,  y  temien- 
do con  justo  fundamento  quel  armada  de  V.  M.  como  le  ha 
quitado  el  deste  sitio ,  no  mandase  que  también  se  ocupase 
en  alguno  en  daño  suyo,  hiciese  nuevo  esfuerzo  en  enviar 
armada  para  esta  primavera  que  viene,  y  que  para  en  tal 
caso  las  cosas  desta  isla  estaban  de  manera  que  se  podria 
mal  apercebillas  para  esperar  sin  manifiesto  peligro  al  ene- 
migo. Escríbeme  de  Roma  el  conde  Brocardo  por  haber  su- 
cedido la  muerte  de  Su  Santidad ,  que  por  cosas  que  podrían 
tocar  al  servicio  de  V.  M.  se  deternía  allí,  habiendo  des- 
pués por  diversas  vias  entendido,  y  especialmente  por  cartas 
del  duque  de  Alcalá  y  de  D.  García  de  Toledo,  el  gran  sen- 


56 

limieulo  que  el  turco  había  hecho  del  mal  suceso  de  su  em- 
presa y  los  aparatos  grandes  y  increíbles  diligencias  que  ha- 
bía mandado  hacer  para  que  de  nuevo  saliese  su  armada 
este  año  en  daño  de  la  cristiandad,  y  señaladamente  para 
apoderarse  desta  isla  y  puertos ;  y  visto  el  poco  remedio  que 
puede  haber  para  poner  en  defensa  las  grandes  ruinas  que 
los  enemigos  han  hecho  en  las  murallas  desta  habitación  y 
haber  consumido  en  esta  guerra  todas  nuestras  cosas ,  me 
tiene  esto  tan  perplejo  y  trabajado,  que  no  lo  puedo  encare- 
cer, y  deseando  como  he  hecho  siempre  de  acertar  en  el  ser- 
vicio de  V.  M.,  me  ha  parecido  y  á  esta  religión  de  enviar 
al  comendador  Antonio  Maldonado  á  dar  cuenta  á  V.  M.  del 
estado  en  que  estas  cosas  están ,  como  á  quien  después  de 
Dios  ha  sido  y  es  solo  el  amparo  desta  su  religión ,  el  cual 
va  tan  bien  informado  de  lo  que  en  esto  podría  decir  á  V.  M. 
que  me  remitiré  á  su  relación ,  á  quien  suplico  encarecida- 
mente le  mande  dar  entera  fée  y  creencia  en  lodo  lo  que  de 
mi  parte  y  desta  religión  dijere  á  V.  M.,  cuya  S.  C.  R.  per- 
sona guarde  Nuestro  Señor  y  conserve  felicísimamente  como 
desea.  En  Malta  8  de  enero  1565.— De  V.  S.  G.  M.  humil- 
de servidor. — El  gran  maestre. — Jhean  de  Vállele. 
Sobre.— A  la  Sacra  Maj.'i  Gat.^^ 


Copia  de  lo  que  Antonio  Maldo- 

Dentro  de  la  caria  |  ji^^Iq  re/irió  á  S.  M.  y  le  suplicó  por 
Rntpnor  sg  iicillcí  6l  si*  <  ^  i  i 

guíenles  documento:    |  parte  del  gran  maestre  y  religión  de 

San  Juan. 


El  gran  maestre  me  envía  á  significar  á  V.  M.  que  por 
los  avisos  que  tiene  de  levante  y  de  los  visoreyes  de  Ñapóles 
y  Sicilia  ha  entendido  los  grandes  preparamcntos  que  el  tur- 


57 

co  hace  de  armada ,  y  que  con  muchas  mas  velas  vendrá 
este  año  sobre  aquella  isla  que  vino  el  pasado ,  y  para  que 
V.  M.  entienda  que  no  ha  habido  descuido  ni  remisión  en 
proveer  á  lo  que  era  necesario  para  su  defensa ,  luego  que 
se  levantó  el  armada,  con  la  primera  fragata  que  pudo  salir, 
se  envió  por  un  ingeniero  al  duque  de  Florencia  para  comen- 
zar á  poner  la  mano  en  la  fortificación  de  la  lengua  de  San 
Telmo  como  estaba  platicado ,  y  el  duque  no  lo  quiso  dar ;  y 
visto  esto ,  presentemente  se  despachó  por  uno  del  papa ,  el 
cual  por  los  tiempos  no  pudo  llegar  á  Malta  hasta  los  últimos 
de  diciembre ,  y  mostrándole  el  sitio  y  considerado  por  él, 
dijo  que  con  tres  mil  gastadores  y  tres  mil  soldados  en  cua- 
tro meses  pondria  en  defensa  aquella  lengua,  y  mandándole 
el  maestre  que  lo  reconociese  bien ,  que  le  parecia  mucho 
tiempo,  lo  tornó  á  rever,  y  habiendo  visto  las  fábricas  y  asien- 
to de  Sant  Telmo ,  y  por  las  ruinas  comprendido  la  fuerza 
del  artillería  del  enemigo  y  considerádolo  maduramente ,  fué 
de  parecer  que  no  se  pusiese  mano  en  la  obra ,  porque  no  se 
acabaría  dentro  de  seis  meses,  ni  seria  posible,  y  así  lo  envía 
firmado  de  su  nombre.  Visto  esto  por  el  maestre  y  consejo, 
y  que  no  se  podia  juntar  la  gente  que  pedia,  se  resolvieron 
en  que  se  dejase  por  las  causas  dichas;  y  estando  esto  ansí, 
y  viendo  aquellas  habitaciones  sin  murallas ,  sin  vituallas, 
sin  municiones  y  sin  gente,  y  el  artillería  la  mayor  parte 
rota ,  y  que  faltando  todo  esto ,  la  religión  no  podría  defen- 
derse de  tan  pujante  enemigo ,  y  es  tan  notorio  el  peligro  si 
esperasen,  suplican  á  V.  M.  considere  lo  que  importa  aque- 
lla isla ,  y  siendo  servido  que  se  defienda ,  la  provea  de  fuer- 
zas como  vee  que  es  menester,  asegurando  á  V.  M.  que  si 
la  religión  tuviere  facultad  y  poder  para  ello ,  lo  hiciera,  y 
cuando  no  hubiere  dispusicion  para  que  V.  M.  la  remedie  y 
salve  por  estar  el  tiempo  tan  adelante ,  suplica  á  V.  M.  el 


""58 

gran  maestre  y  religión  les  mande  señalar  una  plaza  en  Si- 
cilia á  donde  se  puedan  retirar  con  el  cuerpo  de  la  religión, 
y  no  permita  que  se  pierdan,  siendo  cosa  tan  manifiesta  si  es- 
perasen ,  no  tiniendo  las  cosas  necesarias  para  defenderse. 


Copia  de  carta  que  el  gran  maestre  escribo  á  D.  Garda 
de  Toledo  áSde  enero  de  1566  en  creencia  del  general 
fray  Pierres  de  Gio  y  de  otros  comendadores. 

Para  Su  Majestad. 

{Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  íi^OJ 
Ill."«  y  Ex.     Señor  : 

En  consideración  de  los  avisos  que  V.  Ex.**  nos  ha  en- 
viado sobre  el  grande  aparato  que  el  turco  hace  para  enviar 
armada  esta  primavera,  y  que  con  justa  razón  se  puede  creer 
volverá  á  emprender  esta  isla,  atento  la  información  que 
tendrá  de  las  ruinas  en  que  la  dejó  su  armada  por  apode- 
rarse de  estos  puntos  para  mas  comodidad  en  damnificar  la 
cristiandad ,  hemos  nombrado  á  mi  general  fray  Fierres  de 
Gio  y  á  los  comendadores  Pero  de  Justiniano  y  Francisco 
Burgos  para  que  consulten  en  nombre  desta  religión  con 
V.  E.  algunas  cosas  á  este  propósito.  Será  servido  dalles 
entera  fe  y  creencia  en  lo  que  de  mi  parte  y  desta  orden  di- 
jeren á  V.  E.,  cuya  lima,  persona  guarde  Nuestro  Señor 
como  desea.  En  Malta  á  8  de  enero  de  1566. 


m 

Dentro  de  esta  copia 
hay  otra  en  italiano  de 
i7'  de  enero  de,  loOG  í      Hespiiesla  á  la  creencia  del  gran 
en  creencia  de  los  di-  >  maestre 

cho?,  Y  a  su  continua-  '  matbirt. 

cion  sigue  en  castellano 
lo  siguiente: 

Y  con  esta  creencia  insería  un  parescer  del  ingeniero 
que  llevaron  á  Malta  para  su  fortificación,  hecho  á  los  15 
de  enero ,  el  cual  consiste  en  no  poderse  hacer  agora  por  la 
brevedad  del  tiempo.  Háseme  dado  también  una  memoria  de 
cosas  que  ha  menester  la  religión  para  su  defensa ,  que  con 
las  partidas  que  hay  sacadas  en  limpio  ,  y  con  las  que  no 
tienen  sacada  la  suma ,  importarán  da  fsicj  ducientos  y  se- 
senta mil  ducados.  Lo  que  me  ocurre  responder  es,  pesarme 
del  poco  tiempo  que  dice  el  ingeniero  que  hay  para  esta  for- 
tificación, y  habiendo  tanta  prudencia  en  Mons.*"^  R.^^'y  en 
los  demás  que  gobiernan  la  religión  hiíse  de  creer,  como  yo 
lo  creo ,  que  pues  dende  el  primer  dia  que  el  armada  se  fué 
no  se  puso  mano  á  esta  fortificación  y  se  ganó  el  tiempo 
que  al  mgeniero  ahora  le  falla  que  no  se  debió  de  poder 
hacer  mas ,  y  que  el  recuerdo  que  yo  di  en  Malta  á  Mons."'" 
R.""  para  que  esta  obra  se  comenzase  y  se  llevase  adelante, 
ofresciéndole  mil  y  dos  mil  gastadores  y  tallamontes ,  y  al 
fin  los  que  hubiese  menester  pagándolos,  que  también  debió 
de  faltar  la  forma  de  poderse  cumplir ,  ni  se  debió  tampoco 
poder  ejecutar  cuando  por  mis  letras  lo  torné  de  nuevo  á 
acordar  á  los  26  de  octubre.  Pero  porque  podria  ser  que 
quizá  en  Malta  se  tomase  otra  resolución ,  torno  de  nuevo  á 
ofrescer  que  daré  toda  la  gente  que  fuere  menester,  y  que 
si  no  quisieren  ir  por  su  voluntad  los  haré  ir  por  fuerza,  pa- 
gándoles un  justo  precio ;  y  que  de  toda  la  vitualla ,  armas, 


'60 

y  municiones  que  hubiere  en  este  reino  símilmente  será  pro- 
veido  de  todo  lo  que  Mons.""^  111.™' demandare. 

En  lo  que  toca  á  las  necesidades  de  la  religión  y  al  di- 
nero que  han  menester,  yo  no  tengo  que  decir  siendo  ellos 
tan  cuerdos  y  tan  prudentes  que  sabrán  buscar  expidientes 
para  cosa  que  tanto  les  importa,  sino  que  se  podría  certificar 
de  mi  parte  que  yo  siento  las  necesidades  y  trabajos  de  la 
religión  como  los  mios.  También  digo  que  no  obstante  la 
nueva  del  armada  del  turco  y  la  necesidad  que  este  reino 
tiene  de  valerse  de  la  gente  del ,  que  daré  licencia  á  cuatro, 
y  á  cinco  y  á  diez  mil  hombres,  y  á  todos  los  queMons."'  R.™* 
quisiere  sacar  para  ir  á  servir  á  aquella  sacra  religión,  y  que 
en  todas  las  cosas  que  yo  entendiere ,  supiere  y  pudiere  ayu- 
darles, así  con  las  fuerzas  de  tierra,  como  con  las  de  mar,  estoy 
prompto  y  aparejado  para  hacerlo ,  que  tal  orden  y  mante- 
nimiento tengo  de  S.  M.  Y  pues  han  enviado  sobre  estas  cosas 
al  comendador  Maldonado  al  rey  nuestro  señor,  remitiéndome 
á  su  orden  y  mandamiento  no  tendré  mas  que  decir  de  besar 
las  manos  á  su  Señoría  III.""'  y  á  su  sacra  religión  por  ha- 
berme enviado  aquí  tales  personas,  etc. 


Copia  de  carta  de  S.  ñí.  al  vi  rey  de  Ñapóles.  Madrid  16 
de  enero  de  4566. 


Le  entera  del  número  de  alemanes  que  se  han  de  levantar  y  pro- 
visiones que  se  deben  hacer. 


(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
El  Rey  : 

Ule.  duque  primo,  nuestro  visorey,  lugarteniente  y  capi- 
tán general  del  reino  de  Ñapóles:  Todas  vuestras  cartas  hasta 
la  última  de  diez  del  pasado  he  rescibido ,  á  que  se  os  satis- 
fará con  esta  y  advertirá  de  lo  que  de  nuevo  se  ofresce.  Con 
un  correo  que  de  aquí  partió  á  xxx  del  pasado  os  escribimos 
lo  que  habréis  visto  sobre  lo  que  toca  á  los  tres  mil  alemanes 
que  se  han  de  levantar  y  traer  á  ese  reino  este  verano ,  de 
que  va  con  esta  el  duplicado,  y  cuanto  á  esto  no  hay  que 
decir,  sino  que  como  quiera  que  entonces  se  os  ordenó  diése- 
des  cargo  dellos  al  conde  Alberico  de  Lodron ,  después  ha  pa- 
rescido  y  nos  habemos  resuelto  en  que  lo  haga  el  conde  Aní- 
bal de  Altaemps ,  ó  que  en  caso  que  por  indispusicion  ú  otra 
causa  se  excusase,  se  elija  y  tome  en  su  lugar  el  conde  de 
Hebrestain ,  y  que  el  dicho  Alberico  vaya  con  otra  tanta  in- 
fantería alemana  á  la  Goleta ,  y  con  esta  se  os  envían  las  pa- 
tentes é  instrucciones  que  se  acostumbran ,  que  se  las  haréis 
enviar  al  dicho  conde  Aníbal,  y  en  el  caso  arriba  dicho  al  de 
Hebrestain ,  encargando  al  que  hubiere  de  ir  que  ponga  la 
diligencia  que  fuese  posible  para  que  la  dicha  gente  sea  ahí 
en  todo  marzo. 


$2f 

Y  porque  la  provisión  dcstos  alemanes  se  hace  como  en 
la  dicha  carta  se  os  apunto ,  para  que  entren  y  se  pongan  en 
lugar  de  los  cuatro  mil  soldados  españoles,  que  de  los  que 
hay  en  ese  reino  se  han  de  sacar  para  esta  presente  necesi- 
dad, os  encargamos  afectuosamente  que  sin  comunicárnoslo 
ni  consultarnos  mas  sobrello,  pues  es  cosa  que  no  se  puede 
excusar ,  teniendo  los  avisos  que  se  tienen  de  la  venida  del 
armada  del  turco  mas  gruesa  que  el  año  pasado,  proveáis 
que  se  dé  y  envíe  cumplidamente  á  D.  García  de  Toledo, 
nuestro  capitán  general  de  la  mar,  al  tiempo  y  por  la  forma 
y  manera  que  él  os  escribiere  de  nuestra  parte,  porque  así 
conviene  á  nuestro  servicio ,  que  desde  agora  envío  á  man- 
dar lo  mismo  á  D.  Gabriel  de  la  Cueva,  al  virey  de  Cerdeña 
para  los  del  tercio  de  D.  Gonzalo  de  Bracamente  que  están 
allí,  y  al  dicho  D.  García  que  ios  saque  todos,  en  que  se  pre- 
supone habrá  diez  mil  españoles  con  los  que  tiene  en  Sicilia, 
para  que  se  repartan  en  esta  manera :  cinco  mil  en  la  Gole- 
ta ,  demás  de  tres  mil  alemanes  y  cuatro  mil  italianos  que  se 
han  de  poner  junto  á  ella,  mil  para  Malta  con  otros  dos  mil 
alemanes  que  han  de  ir  á  nuestro  sueldo ,  con  los  cuales  y 
otros  tres  mil  soldados  que  ha  de  proveer  el  maestre ,  demás 
de  los  caballeros  de  la  orden  que  se  juntarán,  paresce  que 
aquello  estará  bien  proveído ,  especiabnente  con  la  orden  que 
se  da  en  lo  de  la  fortificación  del  monte  de  San  Telmo :  los 
cuatro  mil  españoles  restantes  han  de  servir  y  ocuparse  en 
la  mar  y  en  la  tierra,  donde  paresciere  al  dicho  D.  García 
que  será  mas  menester,  según  los  enemigos  procedieren. 

Y  demás  de  los  tres  mil  alemanes  que  habéis  de  hacer 
levantar  y  traer  á  ese  reino ,  proveeréis  que  al  tiempo  que 
os  paresciere  serán  menester,  scgund  los  avisos  tuviéredes, 
se  ponga  recabdo  en  esas  marinas  y  plazas  fuertes  del  como 
se  suele  hacer. 


G5 

Los  gastos  que  hicimos  el  año  pasado  y  los  que  en  este 
nescesariamente  se  han  de  hacer  son  tan  forzosos,  por  razón 
que  conviene  anliciparnos ,  porque  podrá  ser  que  por  este 
camino  la  dicha  armada  dejase  de  venir  conosciendo  que  todo 
está  proveido  con  tiempo  y  bastantemente,  que  os  tornamos 
á  rogar  y  encargar  afectuosamente  que  hagáis  todo  lo  posi- 
ble como  de  vos  lo  esperamos,  para  que  ese  reino  nos  sirva 
y  ayude  en  esta  coyuntura  con  lo  que  os  escribimos  por  la 
dicha  carta  de  xxxdel  pasado,  porque  sin  esto  según  el  ex- 
tremo en  que  queda  lo  de  acá  y  lo  que  se  ha  de  proveer  para 
las  fronteras  de  África  y  costas  destos  reinos ,  no  seria  posi- 
ble poderse  cumplir  de  otra  manera,  y  así  habéis  de  proveer 
que  los  dichos  cuatro  mil  soldados  españoles  sean  pagados 
por  el  tiempo  que  se  ocupare  en  esta  jornada  hasta  que  vuel- 
van ahí ,  demás  y  allende  los  dichos  tres  mil  alemanes ,  que 
también  habéis  de  ordenar  lo  sean  á  sus  tiempos;  y  si  el  di- 
nero de  la  ayuda  que  ese  reino  nos  ha  de  hacer  no  veniere 
á  tiempo  para  las  pagas  del  principio,  lo  anticipareis  y  bus- 
careis de  otra  cualquier  parte  que  se  pueda  haber,  porque 
no  haya  falta. 

Demás  de  lo  sobredicho  se  han  de  hacer  vituallas  por 
seis  meses  para  la  provisión  de  los  dichos  xij  mil  infantes  que 
se  han  de  poner  en  la  Goleta,  y  para  otras  tres  mil  personas 
mas  que  llevarán  de  servicio ,  que  se  hace  cuenta  que  mon- 
tará hasta  ccL  ducados.  Destos  os  encargamos  proveáis  que 
se  hagan  ahí  hasta  cient  mil  ducados ,  que  lo  restante  se  pro- 
veerá de  acá  y  de  la  ayuda  que  también  ha  de  hacer  Sicilia; 
y  sacadas  estas  dos  partidas  del  sueldo  de  los  dichos  cuatro 
mil  infantes  y  las  dichas  vituallas ,  lo  que  mas  quedare  ser- 
virá para  los  gastos  que  se  ofrescerán  de  que  con  el  tiempo 
se  os  avisará,  y  en  esto  de  las  vituallas  haréis  que  se  co- 
mience á  entender  luego ,  porque  es  lo  primero  y  mas  prin- 


(!3r 

cipal  que  se  ha  de  poner  en  la  dicha  Goleta ,  que  el  dicho 
D.  García  os  advertirá  y  avisará  de  la  calidad  y  género  que 
han  de  ser,  porque  yo  le  envío  á  mandar  que  él  tenga  cui- 
dado de  toda  esta  provisión  y  hacer  las  demás  en  aquel  rei- 
no y  Cerdeña,  y  en  las  otras  parles  á  donde  conveniere. 

Cuanto  á  lo  de  las  galeras  que  tenéis  armadas  y  de  nue- 
vo habéis  de  armar  y  los  buques  que  se  han  de  hacer ,  así 
en  ese  reino  como  en  Genova,  no  hay  que  decir,  sino  daros 
muchas  gracias  por  el  especial  cuidado  que  dello  habéis  te- 
nido y  tenéis,  y  rogaros  mucho  que  así  lo  hagáis,  pues  veis 
la  gran  necesidad  que  hay  dello ,  y  como  quiera  que  tengo 
por  cierto  habrá  las  dificultades  que  decís  en  levantar  y  jun- 
tar los  remeros  de  buena  boya  que  serán  menester  para  re- 
forzar las  galeras  que  servieron  el  año  pasado  y  las  que  se 
han  de  armar  de  nuevo  ahí,  y  los  que  el  dicho  D.  García 
pretende  haber  demás  de  tres  mil  que  procurará  hacer  en 
Secilia,  todavía  me  haréis  muy  agradable  placer  y  servicio 
en  que  procuréis  y  enderecéis  por  los  mejores  medios  que 
pudiéredes  que  se  haya  el  mayor  número  que  fuese  posible, 
que  pues  han  de  ser  rescibidos  á  nuestro  sueldo,  esto  no 
impidiria  el  servicio  que  escribís  habéis  de  pedir  al  reino 
este  año. 

Y  por  prevenir  en  todas  partes  scribo  al  embajador  de 
Genova  que  para  los  seis  buques  que  allí  se  hacen ,  procure 
haber  toda  la  chusma  que  pudiere ,  y  asimismo  la  jarcia  y  los 
otros  aderezos  que  fueren  menester  para  ponellos  en  orden, 
para  lo  cual  le  proveeréis  del  mas  dinero  nescesario. 

Y  demás  desto  para  los  buques  que  en  Barcelona  se  han 
hecho  y  hacen ,  escribo  al  virey  que  haga  levantar  alguna 
gente  de  buena  boya  en  aquel  Principado,  y  á  D.  Alvaro  de 
Bazan  que  haga  lo  mismo  en  el  Andalucía,  reinos  de  Murcia 
y  Valencia ,  porque  si  fuere  posible  no  solo  se  armen  las  de 


05 

acá,  pero  lleve  alguna  canliJad  sobrada  de  respeto  para  lo 
de  allá. 

En  lo  de  leñámen  y  remos  para  las  galeras  que  se  ha- 
cen en  Secilia,  he  visto  lo  que  proveistes,  que  todo  ello  esta 
muy  bien  y  lo  haréis  como  de  vos  esperamos. 

Demás  de  los  mili  españoles  y  dos  mili  alemanes ,  que 
proveemos  para  lo  de  Malta,  les  mandamos  socorrer  y  ayudar 
con  cincuenta  mili  ducados  en  dinero ,  los  xxxv  mili  para  la 
fortificación  del  monte  de  Sant  Elmo,  y  los  xxv  mili  restantes 
para  municiones  y  vicluallas ,  que  todo  se  remite  á  D.  García 
para  que  tenga  especial  cuidado  de  hacerlo  proveer  con  suma 
diligencia  de  aquel  reino  y  dése ,  y  de  las  otras  partes  donde 
fuere  mas  á  propósito.  Ruégeos  que  enviando  ahí  recabdo 
del  dinero,  deis  orden  que  se  lleven  todas  las  provisiones  que 
para  esto  pidiere  y  se  pudieren  hacer  con  la  brevedad  que  es 
menester,  que  el  comendador  Boniseñe  que  va  al  gran 
maestre  os  informará  y  dará  particular  relación  de  todo.  De 
lo  cual  os  habernos  querido  avisar  como  es  razón  para  que 
tengáis  entendido  las  provisiones  que  se  hacen  y  lo  mucho 
que  para  ellas  es  menester ,  rogándoos  y  encargándoos  pro- 
veáis haya  mucha  diligencia  en  lo  que  ahí  se  hubiere  de 
hacer ,  y  que  tengáis  con  el  dicho  D.  García  toda  buena  in- 
teligencia y  correspondencia,  que  lo  mismo  hará  él  con  vos, 
y  así  se  lo  escribirnos. 

He  visto  la  relación  que  nos  enviáis  de  lo  que  monta  lo 
que  habéis  proveído  el  año  pasado  para  la  Goleta  y  los  bu- 
ques que  se  dieron  á  D.  Alvaro,  que  viene  á  ser  58. 160  du- 
cados ,  descontados  de  los  cuales  los  xxiij  mil  que  os  escri- 
bimos que  tomásedes  allá  del  entretenimiento  de  la  empe- 
ratriz mi  hermana ,  quedaban  y  restaban  xv  mil  clx  que 
decís  se  podrían  descontar  allá  de  la  misma  consignación 
desfe  año  y  que  se  cumplan  acá  con  \o  que  mas  montaren 
Tomo  XXX.  5 


m 

las  vituallas  que  de  nuevo  os  envía  á  pedir  D.  Alonso  Pi- 
meatcl ;  y  porque  esto  está  ya  asentado  y  escripto  á  mi  her- 
mana y  habrá  enviado  persona  para  la  cobranza,  no  con- 
viene en  ninguna  manera  hacer  alteración  ni  novedad;  pero 
yo  tengo  por  bien  que  esto  y  los  v  mil  dclx  ducados  que  hi- 
cistcs  dar  á  D.  Alvaro  de  Bazan  en  dinero  y  vituallas  cuando 
ahí  estuvo ,  los  cuales  se  le  descontarán  y  cargarán  acá ,  lo 
pongáis  á  cuenta  de  lo  que  ese  reino  nos  ha  de  servir  y  ayu- 
dar para  esta  nescesidad ,  y  que  no  dejéis  de  enviar  al  dicho 
D.  Alonso  lo  que  os  ha  enviado  á  pedir  para  la  gente  de 
aquella  plaza ,  y  que  sea  con  la  mas  brevedad  que  pudiére- 
des.  Si  cuando  este  llegare  no  fuere  ido ,  que  con  esto  y  lo 
quel  dicho  D.  García  envía  de  Sicilia ,  estará  para  lo  ordina- 
rio (lella  bien  proveído. 

En  lo  de  los  cuarenta  forzados  que  distes  al  duque  de 
Medina  con  obligación  que  os  los  volviese,  él  nos  ha  supli- 
cado que  aunque  se  le  han  muerto  algunos,  porque  seria 
desarmar  las  galeras  que  tiene  si  los  hubiese  de  restituir,  lo 
suspendiésemos  para  adelante,  y  he  tenido  y  tengo  por  bien 
que  por  la  dicha  causa  no  se  los  pidáis  por  este  verano ,  con 
que  no  se  deje  de  armar  galeras. 

Ordenareis  y  proveeréis  luego  que  las  galeras  que  están 
consignadas  en  ese  reino  y  residen  en  él  se  pongan  á  punto 
y  en  orden  para  que  puedan  salir  cuando  D.  García  se  lo  es- 
cribiese ,  porque  como  se  ha  de  llevar  la  gente  y  vituallas 
de  tantas  partes  para  meter  en  la  Goleta  y  Malta,  importa 
mucho  que  no  haya  ningún  género  de  dilación.  ¡m 

Muy  bien  nos  paresce  haber  escripto  al  embajador  de 
Genova  que  los  vj  mil  dg  ducados  que  os  había  de  remitir 
para  lo  de  la  fortificación  de  la  Goleta  los  retenga  en  su 
poder  y  sirvan  para  en  cuenta  de  lo  que  montaren  los  sei3 
buques  que  por  vuestra  orden  hace  allí  y  para  el  sueldo  de 


67 

los  remeros  de  buena  boya  que  escribimos  haga  levantar  y 
recoger  para  armarlos ,  y  proveeréis  que  lo  que  de  los  dichos 
vj  mil  DG  ducados  habiades  de  enviar  para  lo  de  la  Goleta,  se 
haga  á  tiempo  como  escribís. 

Por  la  gran  nescesidad  que  hay  de  tener  galeras  arma- 
das ,  habemos  tenido  por  bien  de  lomar  y  rescebir  á  nuestro 
sueldo  las  dos  que  tiene  Gabrio  Cer vellón.  Encargamos  os, 
que  entretanto  que  se  mira  dónde  se  han  de  consignar  y 
pagar ,  hagáis  que  sean  socorridas  con  la  cantidad  de  di- 
nero y  vituallas  que  os  paresciere  habrán  menester  para  po- 
nerse en  orden  á  cuenta  del  sueldo  corrido  y  que  le  corriese. 

Los  mili  ducados  que  os  escribimos  se  diesen  de  limosna 
á  la  casa  de  Nuestra  Señora  de  Lorito  ,  ha  de  ser  la  de  An- 
cona  ,  y  así  proveréis  que  se  cumplan  luego.  '^  ^ '  '' 

El  embajador  de  Genova  nos  ha  enviado  á  suplicar  con 
mucha  instancia  le  mandemos  pagar  loque  se  ledéfbe^e 
mili  ducados  de  renta  que  tiene  en  ese  reino,  y  pues  sabéis 
lo  que  gasta ,  sirve  y  trabaja,  recibiré  mucho  placer  en  que 
proveáis  se  le  pague  y  sea  satisfecho  de  todo,  ó  de  la  mayor 
parte  que  se  pudiere*  ohinii^'  ^  o<ir>iíí>oiq  ah 

He  visto  lo  que  escribís  cerca  de  la  resolución  que  tomó 
el  comisario  que  enmstes  á  despedir  y  licenciar  la  infantería 
alemana  del  año  pasado  con  los  oficiales  de  los  capitanes  por 
lo  de  los  gastos  que  se  siguieron  en  alistarlos  y  apercebirlos, 
y  lo  que  de  nuevo  pretenden  los  dichos  capitanes  y  el  eoró^ 
nel,  y  pues  lo  tenéis  en  este  estado  y  D.  Gabriel  os  ha  avi- 
sado de  lo  que  se  acostumbra  hacer  con  los  coroneles  en  se- 
mejantes cosas,  no  liay  que  decir  sino  remitíroslo  para  que 
lo  proveáis  y  acabéis  como  mejor  pudiéredes  ..  de  manera 
que  se  excuse  toda  nueva  introducción.  De  Madrid  á  xvj  de 
enero  de  1566.— Yo  el  rey.— Por  mandado  de  SI  Mi*^ 
Francisco  de  Eraso.  ^  itn'.-jj-ju  m  'i'ni:>      ■  '    .)j'"^o 


68 

Copia  de  minula  de  carta  de  S.M.  al  gran  maestre.  De 
Madrid  á  \S  de  enero  de  15C6. 

En  respuesta  de  la  que  trajo  el  comendador  Boninsegni. 

Contento  por  el  levantamiento  del  sitio  de  Malta — Que  hacidó 
á  Boninsegni,  y  ofrece  continuar  protegiendo  la  religión.  -  uIíIíjuíí 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1131 J 

La  carta  que  me  escrebistes  luego  que  el  armada  del 
turco  se  levantó  y  partió  desa  isla,  me  dio  mucho  contenta- 
miento ,  viendo  por  ella  el  daño  y  desreputación  con  que  se 
fueron.  Después  me  lo  ha  dicho  mas  particularmente  el  co- 
mendador Boninsegni  con  darme  vuestra  carta  y  particular 
cuenta  de  lo  que  le  ordenastes  que  me  propusiese,  lo  cual  he 
oído  de  muy  buena  gana  y  con  el  amor  y  voluntad  que  siem- 
pre he  tenido  y  tengo  á  esa  religión  y  deseo  del  bien  y  aug- 
mento de  las  cosas  della,  así  como  hasta  agora  no  he  faltado 
de  procurarlo  en  cuanto  ha  ocurrido ,  así  al  presente ,  si- 
guiendo el  misme  camino,  y  con  la  misma  buena  voluntad 
he  tenido  por  bien  de  socorreros  y  ayudaros,  así  con  la  gente 
y  dineros  que  entenderéis,  como  con  deciros  mi  paresceren 
la  forma  que  debéis  hacer  vuestra  defensa,  según  que  lo 
uno  y  lo  otro  os  lo  escribirá  mas  largo  de  mi  parte  D.  García 
de  Toledo,  mi  capitán  general  de  la  mar ,  y  os  lo  dirá  Bonin- 
segni, con  quien  aquí  se  ha  tratado  y  platicado  largamente; 
de  manera  que  remitiéndonos  á  ellos  no  será  menester  que 
lo  seamos  en  esta ,  ni  tampoco  acordaros  que  vos  en  la  pre- 
sente necesidad  uséis  de  vuestro  natural  y  acostumbrado 
valor,  prudencia,  cuidado  y  diligencia,  porque  somos  bien 
cierto  que  porneis  la  necesaria  en  lo  que  se  hubiese  de  hacer 


69 

y  proveer ,  y  vos  lo  podéis  estar  de  que  por  nuestra  parte  se 
os  asistirá  y  hará  siempre  todo  lo  posible  en  beneficio  desa  re- 
ligión y  para  la  conservación  y  defensa  dellos.  Muy  R.**",  etc. 


Capitulo  de  carta  autógrafa  del  secretario  Eraso  á  D.  Gar- 
da de  Toledo.  Madrid  \S  de  enero  de  1566. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Muchas  opiniones  ha  habido  acá  en  lo  de  la  Goleta :  en 
fin,  en  lo  que  se  ha  resuelto  es  en  lo  que  se  envía  á  V.  S. 
La  persona  que  ha  de  ir  con  los  doce  mil  soldados  no  está 
declarada.  Creo  que  se  propornán  á  S.  xM.  el  señor  prior  don 
Fernando ,  el  marqués  de  Pescara ,  el  comendador  mayor 
de  Alcántara.  De  creer  es  que  S.  xM.  elegirá  lo  mas  conve- 
niepte.  Para  los  tres  mil  italianos  se  ha  apuntado  que  sea 
uno  de  dos ,  ó  Ghapitin  Viteli  ó  Gésaro  de  Ñapóles.  A  Malta 
va  Ascanio  de  la  Gorna ,  y  Boninseni  terna  á  cargo  los  mil 
soldados  españoles. 

Don  Alvaro  de  Bazan  será  aquí  dentro  de  dos  dias,  y  las 
galeras  han  pasado  adelante  de  Málaga.  Y  el  prior  y  cónsules 
de  Sevilla  se  excusan  de  que  anden  mas  á  costa  da  verías,  y 
habrán  de  quedar  al  sueldo  de  S.  M. 


,  )flib 


70 


Copia  de  carta  de  S.  M.  á  D.  Alvaro  de  Bazan.  Madrid  i8 
de  enero  de  1566. 

Le  encarga  que  tenga  sus  galeras  en  orden  para  febrero  inme- 
diato y  que  levante  el  mayor  número  de  remeros  posible, 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia,) 

Eí.  Rey, 

«^  Pon  Alvaro  de  Bazan,  nuestro  capitán  general  de  las  ga- 
leras que  andan  á  cuenta  de  las  averías:  Del  duque  de  Fran- 
cavila,  nuestro  visorey  de  Cataluña ,  entendí  vuestra  llegada 
á  Rosas  y  cómo  á  los  xj  del  pasado  hablades  pasado  con  las 
galeras  que  trujistes  por  la  playa  de  Barcelona  la  vuelta  del 
Estrecho ,  que  holgaría  hubiese  sido  en  salvamento,  de  que 
nos  avisareis. 

Por  los  avisos  que  tenemos  de  levante  se  entiende  que  el 
turco  vuelve  á  armar  este  verano  con  mas  pujanza  que  el 
pasado,  y  que  se  anticipará  en  bajar  á  ofender  la  cristiandad, 
y  así  habemos  acordado  que  se  comiencen  desde  luego  á 
hacer  algunas  provisiones  y  preparaciones  para  le  resistir  y 
apartar  á  los  fines  que  trujiese;  y  porque  una  de  las  mas  sus- 
tanciales y  convenientes  es  juntar  el  mayor  número  de  ga- 
leras que  se  pudiere,  y  será  forzoso  y  necesario  que  esas  de 
vuestro  cargo  vayan  á  servirnos  y  hallarse  con  la  demás  ar- 
mada que  se  recogiere  en  Italia ,  os  encargo  y  mando  que 
desde  luego  proveáis  que  se  pongan  en  orden  las  dichas  ga- 
leras para  que  podáis  partir  con  ellas  en  todo  el  mes  de  he- 
brero ,  que  yo  mandaré  dar  orden  como  seáis  proveído  del 
dinero  que  fuere  menester  para  la  paga  de  la  gente  y  lo 
demás  nescesario. 


74 

Y  porque  tenemos  relación  que  para  el  armamento  ilesas 
galeras  se  ha  dado  y  entregado  mucha  suma  de  dineros  y 
cantidad  de  vituallas  y  otras  cosas  desde  el  dia  que  comen- 
zaron á  andar  por  cuenta  de  las  averías  ,  y  queremos  saber 
lo  que  esto  monta  ,  y  en  qué  cosas  y  de  qué  manera  se  ha 
gastado  y  distribuido ,  proveáis  que  los  oficiales  saquen  una 
relación  cumplida  dello  y  de  lo  que  se  les  queda  y  restara 
debiendo  hasta  en  fin  del  año  pasado  de  lxv,  poniendo  en  ella 
distintamente  lo  que  se  ha  rescibido  de  nuestra  hacienda 
para  en  cuenta  del  tiempo  que  han  andado  fuera  de  su  dis- 
trito, y  firmado  de  vos  y  dellos  nos  la  enviareis  con  brevedad. 

También  nos  avisareis  del  estado  en  que  dejastes,  cuan- 
do estuvistes  en  Barcelona ,  la  fábrica  de  los  buques  que  allí 
habemos  mandado  hacer,  y  cuantos  están  comenzados ,  y  la 
madera  que  para  ellos  estaba  corlada,  y  qué  recabdo  de  jar- 
cias y  otros  aparejos  habia  para  ellos ,  y  los  que  poco  mas  ó 
menos  entendisles  podrían  acabarse  para  este  verano ,  y  en 
qué  tiempo  se  podrían  armar,  y  si  de  los  que  allí  se  conde- 
nan á  galeras  quedaban  recogidos  algunos  forzados  mas  de 
los  cuarenta  y  seis  que  os  hizo  entregar  el  duque  de  Franca- 
vila.  Y  porque  habiendo  la  falta  que  sabéis  de  remeros,  no 
solo  para  armar  y  poner  en  orden  las  dichas  galeras,  pero 
las  que  se  labran  en  Ñapóles ,  Genova  y  Sicilia ,  conviene 
juntar  y  recoger  en  todas  partes  mucho  número  de  gente  de 
buena  boya ,  os  encargo  y  mando  proveáis  que  desde  luego 
se  comiencen  á  hacer  y  levantar,  así  en  el  Andalucía,  como 
en  los  reinos  de  Murcia  y  Valencia ,  la  mayor  cantidad  dellos 
que  se  pudieren  por  la  forma  y  según  que  mejor  os  parescerá, 
que  brevemente  se  enviará  el  dinero  que  para  esto  fuere  ne- 
cesario ,  y  me  terne  de  vos  por  servido ,  y  lo  mismo  escribi- 
mos al  virey  de  Cataluña  para  lo  de  aquel  Principado.  De 
Madrid  á  xviij  de  enero  de  1566. 


De  mano  de  S.  M. 

Y  avisareis  de  lo  que  en  todo  esto  se  luciere ,  y  de  la 
cantidad  de  gente  de  buena  boya  que  pensáis  que  se  podrá, 
levantar,  y  procurareis  que  sea  la  mas  que  ser  pudiere. — Yo 
el  Rey.— Por  mandado  de  S.  M.— Francisco  de  Eraso. 


Carla  oruj'mal  de  S.  M.  á  D,  García  de  Toledo.  Madrid 
\S  de  enero  de  1566. 

Disposiciones  para  la  fortificación  y  defensa  de  la  Goleta  y  Malta. 
(Archivo  del  Excmo.  Sr,  duque  de  Medínasidonia.) 

Vi  vuestras  letras  de  19  de  octubre  pasado,  por  las  cua- 
les he  entendido  el  subceso  de  vuestro  viaje  en  seguimiento 
de  la  armada  del  turco  después  que  partistes  de  Malta,  y  en 
cuanto  á  esto  no  hay  que  tratar  sino  ser  cierto  hicistes  todo 
lo  posible  por  encontrarla  y  ofenderla,  y  os  torno  a  dar  mu- 
chas gracias  por  lo  que  en  esto  y  en  lo  de  Malta  habéis  he- 
cho ,  que  lo  habernos  entendido  mas  particularmente  de  As- 
canio  de  la  Gorna  y  el  comendador  Boninsene. 

La  orden  que  distes  para  que  se  tornase  á  Ñapóles  y  Lom- 
bardía  la  infantería  que  de  allí  se  sacó ,  está  bien ,  y  así  ha- 
ber escrito  al  visorey  que  tomase  una  compañía  de  los  bisó- 
nos en  lugar  de  la  de  Robles  que  proveisles  á  Julián,  junta- 
mente con  el  cargo  de  maestro  de  campo  de  la  gente  que 
quedó  en  ese  reino ,  y  que  se  sacase  la  extraordinaria  que 
se  metió  en  la  Goleta ,  que  por  las  causas  que  os  escribí  á. 
cinco  de  noviembre  era  muy  nescesario. 


Y  así  lo  fué  enviar  á  invernar  á  D.  Sancho  de  Leiva  á 
Ñapóles  con  las  galeras ,  y  que  las  de  Florencia  fuesen  á  ha- 
cer lo  mismo,  metiendo  en  ellas  la  gente  que  habia  de  po- 
nerse en  Gerdeña,  como  primero  estaba  acordado. 

Y  fué  muy  bien  licenciar  á  las  galeras  de  particulares  y 
ordenar  á  D.  Alvaro  de  Bazan  que  veniese  acá  con  las  de  su 
cargo,  el  cual  llegó  á  Rosas  en  salvamento,  y  aun  no  sabe- 
mos que  haya  ido  donde  ha  de  invernar,  Y  según  los  avisos 
hay  por  todas  partes  de  que  el  turco  piensa  volver  a  armar 
este  año ,  y  anticiparse  y  salir  en  daño  de  la  cristiandad  y 
nuestros  estados,  como  allá  lo  terneis  mejor  entendido,  no 
solo  podréis  enviar  acá  las  otras  ocho  ó  diez;  galeras  que  de- 
cís para  que  ayuden  á  goardar  las  costas  destos  reinos,  pero 
será  nescesario  que  el  dicho  D.  Alvaro  vueha  allá  con  bre- 
vedad, y  por  esto  le  habemos  escrito  se  aderesce  y  ponga 
á  punto,  para  que  en  enviándoselo  á  mandar  pueda  partir  y 
saür  sin  dilación. 

Aunque  resolutamente  no  habíamos  tomado  á  nuestro 
sueldo  las  dos  galeras  de  Cabrio  Gerbellon  como  sabéis,  to- 
davía, pues  las  enviastes  á  Ñapóles,  escríbolo  al  virey  que 
las  provea  de  lo  nescesario  como  á  las  otras ,  paresciéndome 
serán  menester  en  esta  coyuntura ,  y  puesto  que.decís  que  lo 
habéis  hecho  en  lugar  de  las  de  Vendineli  Sauli.  El  embaja- 
dor de  Genova  nos  escribe  que  habia  tornado  á  armar  otra, 
y  que  le  habia  ya  tomado  la  muestra,  de  manera  que  será 
nescesario  mirar  de  donde  han  de  ser  consignadas  y  pagadas 
las  del  dicho  Cabrio,  de  que  nos  avisareis.  tgüj) 

Hicistes  bien  en  proveer  las  dos  compañías  que  vacaron 
por  muerte  de  Joan  de  la  Gerda  y  xMi randa  en  sus  alféreces, 
pues  lo  tienen  tan  merescido,  por  lo  que  hicieron  y  pelearon 
en  lo  de  Malta. 

El  maestro  de  las  galeras  que  enviastes  á  Barcelona  lie- 


74 

gó  allí,  y  he  escrito  al  duque  de  Francavila  que  le  trate  bien 
y  que  no  se  entremeta  otro  oficial  en  la  fábrica  de  los  bu- 
ques que  allí  se  labran  de  nuevo  como  os  paresce ,  en  los 
cuales  se  ha  dado  y  da  toda  la  prisa  posible,  y  se  ha  proveí- 
do del  dinero  nescesario  para  ello.  Vos  desde  luego  mirareis 
y  avisareis  de  los  que  se  deben  y  pueden  armar,  y  qué  for- 
ma y  orden  se  terna  para  ello,  que  ya  sabéis  la  falta  que  hay 
de  forzados ,  no  embargante  que  se  han  recogido  y  recogen 
todos  los  que  se  pueden  haber,  así  destos  reinos  como  de 
Flándes,  y  se  hace  acá  nueva  declaración  de  las  pragmáti- 
cas que  hay  sobre  lo  que  toca  á  condenar  á  las  galeras ;  y  los 
esclavos  que  se  habían  de  comprar  por  medio  de  los  oficia- 
les de  la  casa  de  la  contratación  de  Sevilla  han  sido  hasta 
agora  pocos,  porque  no  se  hallan  sino  caros  y  no  tan  á  pro- 
pósito como  son  menester ,  y  se  les  ha  escrito  y  escribirá 
dándoles  prisa  á  ello. 

En  lo  que  toca  á  la  fortificación  de  la  Goleta,  habiendo 
visto  lo  que  antes  de  agora  habéis  escrito  y  los  designios  que 
estaban  antes  hechos,  y  de  nuevo  envió  D.  Alonso  Pimentel, 
nos  resolvimos  en  lo  que  os  habrá  mostrado  y  comunicado 
el  Fratin  que  ha  dias  que  partió  de  aquí  conforme  á  la  or- 
den que  le  dimos,  y  os  encargamos  mucho  que  pues  hay  allá 
recaudo  de  dinero  hagáis  todo  lo  posible  para  que  con  di- 
ligencia y  cuidado  se  ponga  mano  en  la  obra ,  ordenando  y 
proveyendo  por  vuestra  parte  todo  lo  que  conviniere. 

Y  porque  según  los  materiales,  petrechos,  maestros,  y 
gastadores  y  otras  cosas  necesarias  se  han  de  llevar  de  tan 
diferentes  partes ,  no  podrá  dejar  de  haber  dilación ,  y  tenién- 
dose los  avisos  que  se  tienen  de  la  dicha  armada  del  turco 
y  de  la  brevedad  con  que  quiere  salir,  importa  anticiparnos  y 
prevenir  el  remedio  y  seguridad  de  aquella  plaza ,  como  se 
debe  y  es  razón ,  porque  sin  duda  está  en  el  punto  que  ha- 


75 

beis  escrito  y  escribís ,  visto  que  no  habia  tiempo  para  ha- 
cerse por  medio  de  la  dicha  fortificación ,  nos  habernos  re- 
suelto y  determinado  de  proveer  que  se  pongan  cerca  della 
en  el  sitio  que  paresciere  mas  convenir,  así  para  lo  del  agua 
como  para  los  otros  efectos,  hasta  doce  mil  soldados,  allende 
de  la  gente  ordinaria  que  habrá  dentro  della ,  en  esta  mane- 
ra; cinco  mil  españoles  de  los  viejos,  cuatro  mil  italianos, 
tres  mil  alemanes,  y  acá  se  nombrarán  los  coroneles  que  los 
deben  levantar  y  en  qué  partes ,  y  se  les  avisará  y  enviarán 
los  despachos  para  ello,  Y  aunque  al  presente  no  se  puede  sa- 
ber cierto  para  cuando  se  deben  levantar  y  embarcar,  por  de- 
pender como  depende  de  lo  que  hará  el  enemigo  y  la  prisa 
que  se  dará ,  toda\  ía  paresce  que  deben  estar  en  los  puertos 
por  todo  el  mes  de  marzo,  y  vos  nos  avisareis  luego  con  di- 
ligencia de  lo  que  cerca  desto  os  parescerá,  y  la  traza  y  or- 
den que  pensáis  dar  para  embarcar  y  tomar  la  dicha  gente 
y  en  qué  partes,  y  meterla  en  las  dichas  plazas,  y  los  avisos 
que  tuviéredes  de  la  dicha  armada  nos  daréis  continua  y  or- 
dinariamente, y  por  esto  no  se  ha  de  dejar  de  dar  toda  la  pri- 
sa que  fuere  posible  á  la  fortificación  de  la  Goleta. 

Demás  de  las  vituallas  que  dése  reino  y  á  cuenta  del  se 
suelen  enviar  á  la  Goleta  para  la  gente  ordinaria,  de  que  os 
encargamos  tengáis  mucho  cuidado ,  es  forzoso  hacer  gran 
provisión  de  harina,  vino,  queso,  carne  salada,  pescado, 
vinagre,  y  aceite  y  legumbres,  y  lo  que  mas  será  menester 
para  proveimiento  y  sostenimiento  de  los  dichos  12  mil  in- 
fantes, y  la  gente  de  servicio  que  suele  ir  con  ellos  que  se 
ha  de  moderar,  y  que  esto  sea  á  lo  menos  para  seis  meses, 
contando  desde  abril  en  adelante,  que  podrá  entrar  y  estar 
en  aquella  plaza  hasta  volverlos  á  sacar  y  poner  en  sus  pre- 
sidios; y  en  esto  habéis  de  usar  de  toda  la  diligencia  posible 
repartiendo  para  que  se  hagan  en  ese  reino  todo  lo  mas  que 


7G 

se  pudiere ,  y  en  las  otras  partes  y  lugares  donde  fuere  á 
propósito  para  la  brevedad  y  el  beneficio ,  que  yo  escribo  á 
los  visoreyes  de  Ñapóles  y  Gerdeña  y  al  embajador  de  Ge- 
nova que  den  todo  el  favor,  y  calor  y  buen  aviamiento  que 
fuere  menester  para  ello  como  soy  cierto  lo  harán,  con  los 
cuales  para  esto  y  lo  demás  que  se  ofresciere  terneis  buena 
correspondencia  como  lo  soléis  hacer. 

Y  como  quiera  que  se  queda  tratando  de  hacer  un  cara-: 
bio  para  proveeros  de  dinero  para  lo  sobredicho ,  y  se  envia- 
rá remitido  á  Genova  con  orden  del  embajador  que  lo  distri- 
buya según ,  y  cómo  y  por  la  orden  que  le  diéredes ,  si  en-; 
tretanto  que  va  pudiésedes  proveer  que  de  lo  que  ese  reino 
otorgara  para  esta  presente  necesidad ,  como  os  lo  habernos 
escrito  con  el  correo  que  partió  á  los  30  del  pasado,  ó  de  otra 
parte,  anticipando  lo  que  será  menester,  seria  muy  á  propó- 
sito por  ganar  tiempo,  ó  á  lo  menos  que  lo  que  se  hubiere  de 
hacer  ahí  se  ponga  luego  la  mano  en  ello ,  tomándolo  fiado 
ó  haciendo  algún  partido  como  mejor  os  parescerá,  que  acá 
se  dará  en  la  conclusión  del  dicho  cambio  toda  la  prisa  po- 
sible ,  y  que  se  cumpla  la  paga  del  á  los  mas  breves  dias 
que  ser  pueda. 

Y  terneis  cuidado  de  proveer  para  la  dicha  Goleta  de  la 
pólvora  de  arcabuz  y  otras  municiones  que  fueren  menester 
para  esta  defensa,  que  al  visorey  de  Ñapóles  habemos  escri- 
to que  haga  juntar  y  recoger  todo  el  salitre  que  se  pudiere 
haber,  y  lo  haga  labrar  y  hacer  pólvora  con  toda  brevedad, 
tanto  para  esto  como  para  lo  de  Malta. 

Cuanto  á  lo  de  Malta,  habiendo  oido  á  los  dichos  Asca- 
nio  y  Boninsene,  y  visto  los  dcsinios  que  han  traido  de  cómo 
han  quedado  aquellas  plazas,  y  lo  que  se  debe  hacer  y  pro- 
veer en  la  fortificación  para  la  defensa  dellas ,  ha  parcscido 
lo  que  veréis  por  la  relación  que  irá  con  esta ,  y  aunque  creo 


77 

que  el  gran  maestre  habrá  comenzado  á  repararse  y  prepa* 
rarse ,  porc(iie  la  falta  de  gastadores  será  mucha  y  largo  el 
enviarlos  y  llevarlos,  mirareis  si  como  lo  pensábades  hacer 
será  todavía  bien  enviar  allí  algunas  galeras  que  no  hagan 
falta  para  el  conducir  de  la  dicha  gente ,  para  que  lo?  forza- 
dos puedan  ayudar  á  lo  que  se  ha  de  hacer ,  teniendo  espe- 
cial cuidado  de  favorescerlos  en  todo  lo  que  pudiéredes  como 
lo  han  menester.  E  yo  sé  que  lo  haréis,  no  embargante  que 
tengáis  razón  de  parecerás  mal  el  término  de  que  el  gran 
maestre  usó  en  ¡o  de  la  carta  que  escribió  Sn  Santidad,  á 
lo  cual  ha  querido  satisfacer  acá  cumplidamente  de  su  par- 
te el  dicho  Boninsene,  dándole  las  tratas  ordinarias,  y  aun 
mas  cantidad  como  os  parescerá  según  la  nescesidad,  que  yo 
os  lo  remito.  -.i»  lá  r,Lr.  uhíü:í  7  sbiiüu  i  -íb  i>y/  iy  aiij! 

Y  como  quiera  que  los  dias' pasados  nos  escribistés  \^\ié' 
semos  por  bien  de  socorrerlos  para  la  fortificación  con  50  mil 
ducados,  habemos  querido  demás  dellos  acrescentarles  otros 
20  mil,  los  diez  mil  para  vituallas,  y  los  otros  diez  mil  para 
pólvora  y  municiones ,  y  se  queda  haciendo  el  cambio  dellos 
que  irá  á  Genova ,  á  donde  podréis  avisar  al  embajador,  los 
que  remitirá  á  Ñápeles,  ó  ahí  ó  otras  partes,  para  que  aque- 
llos se  hagan  con  brevedad,  que  la  persona  que  envió  á  asis- 
tir de  nuestra  parte  en  la  dicha  fortificación  y  labor  que  se 
ha  de  hacer  en  Malta ,  irá  juntamente  con  el  dicho  Boninse- 
ne por  Ñapóles  é  informará  al  dicho  visorey  de  las  cosas  que 
ambos  entenderán  que  se  habrán  de  proveer  y  enviar,  así 
de  vituallas,  y  municiones  y  herramientas,  como  de  maestros, 
y  oficiales  y  otras  cosas  para  la  dicha  fortificación  y  obraSy 
y  pasarán  donde  estuviéredes  á  daros  razón  de  toilo,  y  tomar 
la  orden  de  vos  de  lodo  lo  que  se  ha  de  hacer ,  porque  que- 
remos encargaros  particularmente  de  lodo  esto  para  que  le 
deis  el  buen  recabdo  que  habéis  dado  siempre  á  lo  que  os 


78 

encomendamos,  que  á  todos  se  da  orden  que  sigan  la  que 
vos  les  diéredes,  y  terneis  la  mano  en  que  los  dichos. 30  mil 
ducados  que  se  aplican  para  las  obras  j  se  gasten  y  distribu- 
yan en  ellas  y  no  en  otra  cosa.  Y  porque  lo  principal  ha  de 
ser  la  gente,  nos  habernos  resuelto  en  enviar  a  nuestro  suel-; 
do  mil  soldados  españoles  de  los  viejos,  y  dos  mil  tudescos, 
con  los  cuales,  y  la  genle  que  el  dicho  maestre  terna  y  pro-^ 
veerá,  se  hace  cuenta  que  llegan  á  cumplimiento  de  seis  mil 
sin  los  caballeros,  que  será  suficiente  número  para  la  de- 
fensa según  el  sitio  y  preparación  se  hará ,  y  porque  siendo 
muerto  el  papa  no  sabemos  si  el  colegio  en  sede  vacante  quer-r 
rá  pagar  los  tres  mil  infantes  que  él  tenia  ofrescidos  á  la  re- 
ligión para  esta  defensa ,  tratareis  luego  con  el  maestre  para 
que  él  vea  de  á  donde  y  cómo  les  ha  de  proveer,  aunque  sea 
desollando  la  orden ,  pues  ha  de  ser  por  sola  esta  vez ,  y  veen 
que  yo  hago  por  ellos  mas  de  lo  que  puedo. 

Y  porque  la  dificultad  del  agua  es  mucha  en  aquella  isla, 
como  sabéis,  aunque  se  ha  de  hacer  todo  lo  último  por  inchir 
con  tiempo  las  cisternas  del  castillo  de  San  Telmo  ,  y  otras 
que  de  nuevo  se  puedan  acomodar  para  suplir  á  esto,  paresce 
que  debéis  proveer  que  en  ese  reino  se  compren  de  contado, 
ó  haciendo  partidos  y  asientos  con  mercaderes,  dos  mil  botas 
de  buen  vino ,  y  se  lleven  para  que  se  den  á  la  gente  que 
nos  enviaremos  á  cuenta  de  su  sueldo ,  y  á  los  otros  por  sus 
dineros ,  y  ordenareis  esto  como  mejor  os  paresciere  con 
tiempo  y  de  manera  que  haya  buena  cuenta  y  razón. 

Al  visorey  de  Ñapóles  habemos  ya  escrito  que  dé  orden 
que  se  levanten  tres  mil  alemanes  para  meter  en  aquel  reino, 
y  que  los  haga  traer  para  ser  allí  en  todo  marzo,  porque  en- 
tonces paresce  que  será  tiempo  para  sacar  hasta  4  mil  sol- 
dados españoles  de  los  que  habrá  en  aquel  reino  con  los  que 
se  tornan  de  la  Goleta ,  y  si  algunos  sobraren  quedarán  allí. 


79 

y  desde  agora  scribimos  al  virej^  que  esté  prevenido  desto, 
y  que  os  los  dé  en  cualquier  tiempo  que  se  los  pidáis. 
,..[. También  ordenamos  al  duque  de  Alburquerque ,  nuestro 
gobernador  del  estado  de  Milán ,  que  haga  levantar  y  bajar 
otros  o  mil  alemanes  al  tiempo  que  le  paresciere,  para  que 
los  españoles  que  hubiere  allí  puedan  salir  eirá  embarcarse 
en  la  parte  que  parezca  ser  mas  á  propósito  para  en  fin  de 
marzo ,  y  que  para  entonces  os  los  dé ,  ó  antes  si  os  pares- 
ciere  que  son  menester. 

En  Cerdeña  se  pornán  1,400  italianos,  y  de  allí  se  sa- 
cará el  tercio  que  enviastes  de  D.  Gonzalo  de  Bracamonte, 
que  con  las  tres  compañías  que  tomo  y  trujo  de  Ñapóles  don 
Alvaro  de  Bazao,  se  entiende  que  lerna  número  de  1,800 
soldados. 

De  manera  que  presuponiendo  que  en  ese  reino  queda- 
rían ,  y  terneis  dos  mil  españoles ,  habrá  y  se  podrán  juntar 
en  esas  partes  según  la  relación  tenemos  hasta  10  mil  in- 
fantes, destos  se  han  de  enviar  como  eslá  dicho,  los  cinco 
mil  á  la  Goleta  y  mil  á  Malta,  y  el  resto  servirá  para  lo  dése 
reino  y  lo  de  la  mar. 

En  Oran  y  Mazarquivir  mandaremos  poner  y  meter  dos 
mil  soldados  cuando  sea  tiempo  con  provisión  de  vituallas  y 
municiones ;  y  esto  último  se  hará  en  Melilla  y  Peñón  de 
Vélez ,  y  se  preverná  lo  nescesario  para  la  seguridad  de  las 
plazas  importantes  de  estos  reinos  y  de  las  islas.  Y  de  todo 
lo  cual  os  habemos  querido  tan  particularmente  avisar  para 
que  tengáis  entera  noticia  dello  como  es  razón  y  nos  aviséis 
luego  particularmente  de  lo  que  sobre  todo  os  paresce,  espe- 
cialmente al  tiempo  que  se  debe  aprestar  para  embarcar  la 
dicha  gente,  y  dónde  ha  de  ser,  y  qué  orden  pensáis  dar  en 
la  que  se  ha  de  llevar  de  Lombardía ,  Cerdeña  y  Ñapóles ,  y 


80 

se  ha  de  metdr  en  lá  Goleta  y  Malta ,  y  en  las  vituallas  y  mu- 
niciones que  han  de  ir  á  éstas  plazas. 

Y  toda  eísta  gente  y  los  ministros  della  llevarán  orden 
donde  quiera  qué  estén  para  que  sigan  en  todo  la  que  vos 
les  diéredes ,  sacando  en  una  pai*te  y  poniendo  en  otra  sin 
esperar  otro  nuestro  mandamiento ,  ó  teniéndolos  en  las  ga- 
leras como  viéredes  convénií  más  á  nuestt'o  sei^vicio. 

Puéá  veis  el  gráíi  gasto  que  se  nos  seguirá  en  hacer  esta 
provisión  de  gente ,  vituallas  y  municiones ,  y  otras  obras  y 
fortificaciones ,  y  lo  que  se  gastó  y  consumió  destos  reinos  el 
año  pasado ,  os  tornamos  á  encargar  que  hagáis  todo  lo  úl- 
timo para  que  ese  reino  nos  sirva  en  esta  présente  nesce- 
sidad  conformé  á  lo  que  os  habernos  escrito  por  la  dicha 
carta  de  30  del  pasado ,  que  la  misma  diligencia  habemos 
mandado  hacer  en  Ñapóles ,  y  de  acá  se  proveerá  de  todo 
lo  que  se  pudiere ,  aunque  por  lo  que  está  dicho  está  lo  de 
acá  en  mayor  necesidad  de  lo  que  podéis  pensar. 

En  lo  de  las  galeras  de  Joan  Andrea  hicistes  bien  en  ad- 
vertirnos de  lo  qué  os  ocurre  cerca  dcslOj  y  de  comprar  las 
de  Adán  Centurión  y  las  de  los  Lomelines ,  y  tomar  asiento 
con  la  señoría  dé  Genova  y  duque  de  Saboya.  Todo  lo  cual 
se  mirará  cómo  y  de  la  manera  que  se  debe  y  podrá  hacer, 
porque  hay  tanta  falta  de  dinero  y  consignaciones  en  Ñapó- 
les y  en  todas  partes  como  tenéis  entendido. 

En  todo  caso  nos  enviareis  la  relación  de  lo  que  se  ha 
gastado  en  el  armada  del  año  pasado ,  y  también  de  lo  que 
se  debe  á  las  galeras  que  son  á  nuestra  cuenta  y  del  sub- 
sidio, cómo  se  han  aplicado  las  unas  y  las  otras  para  que 
esté  la  cuenta  separada ,  conforme  á  lo  que  os  tenemos  es- 
crito. 

Acá  habemos  mandado  librar  agora  últimamente  á  Joan 


I 


81 

Andrea ,  á  Adán  Centurión  y  á  Marco  Antonio  Colona  lo  que 
veréis  por  la  relación  que  será  con  esta ,  la  cual  haréis  dar 
á  los  oficiales  para  que  la  tengan  en  los  libros.  De  Madrid 
á  18  de  enero  de  1566. — Yo  el  Rey. — Francisco  de  Eraso. 


Respuesta  á  las  primeras  de  D.  García  de  Toledo. -Dup 


da 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo.  Madrid 
18  de  enero  de  1566. 

Aprueba  todo  cuanto  aconsejó  al  gran  maestre  sobre  la  pronta 
fortificación  de  Malta,  y  le  entera  de  varias  disposiciones  que  ha 
tomado  para  que  se  activen  la  construcción  de  galeras  y  el  levanta- 
miento de  gente. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Sicilia :  Después  de  scripfa  esa  otra  carta 
llegaron  las  vuestras  de  xxvij  y  postrero  de  noviembre  y  xij 
de  diciembre  pasado,  á  que  se  os  satisfará  en  esta. 

He  visto  la  copia  de  la  carta  que  scribistes  al  gran  maes- 
tre en  lo  de  la  fortificación  de  Malta  y  lo  que  os  respondió, 
y  hicistes  muy  bien  de  ponerle  delante  todas  aquellas  par- 
ticularidades conforníc  á  lo  que  le  dijistes  de  palabra  cuan- 
do alU  estovistes ,  porque  no  hay  dubda  sino  que  será  muy 
necesario  poner  desde  luego  mano  en  la  obra,  y  no  difirirlo 
ni  sperar  la  respuesta  de  los  príncipes ,  á  quien  habia  dado 
parle  del  estado  en  que  quedaba  lo  de  allí,  estaudo  el  tiempo 
tan  adelante  y  teniéndose  en  razón  por  cierto  que  habia  de 
Tomo  XXX.  6 


volver  el  armada  del  turco,  según  se  confirma  por  los  últi- 
mos avisos  que  nos  enviáis  que  se  aprueban  por  todas  par- 
tes ,  y  todavía  es  de  creer  que  habrá  comenzado  y  hecho 
todo  lo  que  ha  podido,  pues  no  es  cosa  que  se  deba  pensar 
que  haya  de  desamparar  ni  dejar  aquella  plaza ,  especial- 
mente con  la  ayuda  que  le  enviastes  á  ofrescer  haríades  de 
dineros  vuestros ,  que  os  lo  agradezco  mucho ,  y  con  la  or- 
den que  habiades  dado  para  que  pudiese  aprovecharse  de  los 
doce  mil  ducados  que  se  debian  á  la  religión  del  tiempo  de 
Joan  de  Vega  y  duque  de  Medina ,  porque  con  esto  y  las  otras 
comodidades  que  le  habéis  hecho  y  liareis ,  no  se  podrá  ex- 
cusar, ni  tratar  ni  pensar  de  mudarse  á  Zaragoza,  que  esto 
como  decís  en  ninguna  manera  convernía  ni  yo  lo  permiti- 
ria,  y  por  esto  se  os  avisó  con  el  correo  que  partió  de  aquí  á 
los  XXX  del  pasado,  particularmente  la  provisión  que  hacía- 
mos en  lo  del  dinero  y  la  gente ,  y  se  dijo  asimismo  al  co- 
mendador Bonisene  para  que  le  advirtiese  dello. 

Vos  tenéis  muy  gran  razón  en  lo  que  toca  á  lo  de  la  Go- 
leta, que  según  el  tiempo  está  tan  adelante  y  las  dificultades 
que  habrá  en  comenzarse  la  obra,  no  embargante  que  eslo 
no  ha  de  cesar  antes  con  última  diligencia  ponerse  la  mano, 
para  que  se  haga  lo  que  llevó  el  Fralin,  pues  ha  tantos  dias 
que  hay  allá  recaudo  de  dineros ,  no  se  podría  remediar  si  no 
se  metiesen  con  tiempo  los  xij  mil  infantes  que  en  esa  otra 
os  scribimos  para  que  se  pongan  en  el  sitio  y  lugar  que  se 
os  envía  designado  con  provisión  de  vitualla  para  seis  meses, 
que  se  ha  de  mirar  de  la  manera  que  allá  se  podrá  tener  y 
conservar  y  de  qué  partes  se  ha  de  llevar ,  y  si  será  menes- 
ter hacer  de  nuevo  hornos  para  hacer  el  pan ,  y  proveer  de 
leña  para  ello ,  que  habiéndose  tratado  y  comunicado  sobre- 
lio  muy  particularmente ,  paresce  que  es  el  mas  seguro  y  á 
propósito  sitio ,  y  que  requiere  tomarle  con  la  mas  brevedad 


85 

que  sea  posible ,  porque  no  se  anticipe  la  armada  del  turco  ó 
el  rey  de  Túnez,  de  quien  no  se  puede  ni  debe  tener  ningu- 
na confianza,  según  nos  ha  scriplo  D.  Alonso  Pimeutel,  que 
es  conforme  á  la  copia  que  nos  enviastes. 

Y  cuanto  toca  á  echarle  de  aquel  reino  y  hacer  una  fuer- 
za en  la  ciudad  hacia  la  parte  del  Estaño ,  porque  tenga  mas 
cerca  la  responsion  de  la  Goleta ,  por  agora  no  se  debe  ui 
puede  atender  sino  á  la  defensa  y  conservación  della,  y  des- 
pués questoviere  allá  la  gente,  según  lo  que  hiciere  la  dicha 
armada  y  el  estado  de  las  cosas  y  las  ocasiones  que  se  ofres- 
cieren ,  así  se  podrá  mirar  y  ordenar  lo  que  se  debrá  hacer, 
que  no  es  fuera  de  proposito  con  un  mismo  gasto  tener  res- 
pecto á  todo ;  y  á  D.  Alonso  Pimentel  scribimos  en  esta  sus- 
tancia para  que  tenga  entendido  la  provisión  que  mandamos 
hacer,  y  en  lo  demás  nos  avise  y  advierta  de  lo  que  le  ocur- 
re y  paresce.  ■>  s^h 

En  lo  que  toca  á  los  buques  de  galeras  que  se  hacen ,  el 
visorey  de  Xápoles  nos  scribe  que  en  ellos  y  en  los  que  dio 
orden  que  se  labrasen  en  Genova  y  en  el  Citraro ,  se  da  toda 
priesa  posible;  es  verdad  que  en  lo  que  toca  á  la  chusma  de 
buena  boya ,  como  os  debe  haber  avisado,  halla  gran  dificul- 
tad y  cuasi  imposibilidad,  todavía  le  enviamos  á  encargar 
afectuosamente,  que  pues  vé  lo  que  en  ello  va,  haga  la  úl- 
tima diligencia  para  juntar  todos  los  remeros  de  buena  boya 
que  se  pudieren  haber  sin  parar  en  lo  del  sueldo ,  que  esto 
será  el  menor  inconveniente,  y  al  embajador  de  Genova  et^ 
vio  á  mandar  que  para  los  seis  buques  que  labra  allí  haga 
lo  mismo,  de  manera  que  todos  ó  los  mas  se  puedan  armar 
y  navegar  á  tiempo. 

En  los  que  acá  se  hacen  se  ha  dado  y  da  toda  la  priesa 
posible,  y  el  visorey  de  Cataluña  os  avisará  del  estado  en 


84 

que  están  y  los  que  se  podrán  acabar  para  este  verano ,  que 
así  se  lo  ordenamos,  y  que  os  envíe  relaeion  de  las  cotonías, 
remos,  jarcias  y  otras  cosas  tocantes  á  las  galeras  que  tiene, 
para  que  si  faltare  algo  de  lo  que  allí  hay  y  acá  no  se  puede 
hallar  lo  enviéis,  que  también  se  hará  diligencia  en  Francia 
como  el  año  pasado ,  y  asimismo  lescribimos  que  mire  de  ha- 
cer allí  todos  los  remeros  de  buena  boya  que  pudiere ,  y  á 
D.  Alvaro  de  Bazan  que  en  el  Andalucía  y  reino  de  Murcia 
y  en  Valencia  junte  todos  los  que  se  hallaren ,  no  solo  para 
poner  á  punto  los  buques  que  acá  se  hobieren  de  armar,  pero 
para  llevar  allá  de  respecto,  que  aunque  scribis  procurareis 
hacer  en  ese  reino  hasta  tres  mili ,  todavía  según  la  necesi- 
dad es  menester  prevenir  en  todas  partes ,  siendo  esto  el  prin- 
cipal miembro ,  y  tenemos  por  cierto  que  habiendo  tantas 
dificultades  no  se  podrán  armar  las  que  el  año  pasado  bacía- 
des  cuenta,  ni  que  veniendo  la  armada  del  turco,  aunque  no 
sea  mas  poderosa  que  esta  última  vez ,  se  podrá  resistir  ni 
ofender  como  lo  apuntáis ,  specialmente  no  pudiéndoos  apro- 
vechar de  navios  de  alto  bordo;  pero  no  por  esto  se  ha  de 
dejar  de  hacer  todo  lo  posible,  y  al  tiempo  mirareis  los  efec- 
tos que  acá  ó  en  levante  se  podían  hacer. 

En  lo  del  leñámen  que  enviastes  á  pedir  al  visorey  de 
Ñápeles  para  los  xv  buques  que  en  ese  reino  proveis  que  se 
hagan ,  61  nos  ha  scripto  que  os  habia  enviado  ciertos  des- 
pachos para  que  se  cortase  y  llenase  con  relaeion  de  la  or- 
den que  se  ha  de  tener  en  la  paga  dellos  y  de  los  diez  mil 
remos  que  de  allí  se  os  han  de  enviar  hecha  por  la  Sumaria, 
según  habréis  visto ,  y  le  torno  á  encargar  que  en  todo  lo 
que  se  ofresciere  para  estas  cosas  dé  la  ayuda  y  calor  que 
vée  que  es  menester,  usando  en  ello  de  toda  diligencia. 

Paréseeme  bien  la  resolución  que  habéis  tomado  de  ex- 


85 

cusar  vuestra  ida  á  Palerrao,  y  ir  á  Galanía  y  á  Augusta  para 
lo  que  toca  á  la  Ibrliíicacion ,  y  para  lo  demás  que  os  habe- 
rnos ordenado  y  ordenamos.  J©d  ae  (jImícüo  »u|) 

Mucho  quisiéramos  que  llegara  á  tiempo  lo  que  scribis- 
tes  al  embajador  de  Genova  para  que  no  se  tomasen  á  cam- 
bio por  Adán  Ginturion  los  cincuenta  y  seis  mili  escudos  para 
la  fábrica  de  la  Goleta,  sino  que  se  proveyeran  y  tomaran  de 
los  cient  mili  que  últimamente  os  enviamos ,  porque  las  nes- 
cesidades  de  acá  son  de  manera  que  no  lo  podrí ades  creer ; 
pero  esta  suma  podrá  ayudar  á  las  vituallas  que  se  han  de 
meter  en  la  Goleta  para  provisión  de  los  xij  mil  infantes,  que 
es  lo  mas  preciso  y  nescesario ,  y  para  lo  del  sueldo  dellos  ser- 
virá el  dinero  que  por  cambio  enviamos  de  acá,  juntamente 
con  lo  que  Ñapóles  y  ese  reino  servirán  para  esta  presen- 
te nescesidad ,  como  lo  habemos  escripto  y  lo  tenemos  por 
cierto. 

Está  muy  bien  haber  proveido  á  la  Goleta  cumplimiento 
de  XL  mil  ducados  para  que  puedan  ser  socorridos ,  y  entre- 
tenerse entretanto  que  de  acá  se  provee  mas  dinero ,  pues  por 
haberse  empleado  y  gastado  veinte  mili  ducados  en  bizcocho, 
no  se  pudieron  enviar  enteramente  los  setenta  mili  ducados 
que  el  año  pasado  habíamos  consignado  para  esto;  y  agra- 
dézcoos  el  cuidado  que  habéis  tenido  y  tenéis  de  proveer  y 
enviar  á  aquella  fuerza  las  vituallas  que  decís ;  y  para  que 
de  aquí  adelante  tengáis  entendido  las  que  habéis  de  enviar 
en  cada  un  año  por  cuenta  dése  reino,  enviamos  á  mandar 
al  dicho  D.  Alonso  y  á  los  oficiales  que  allí  residen  que  ha-; 
gan  sacar  la  relación  de  lo  que  será  menester  para  la  provi- 
sión de  la  gente  ordinaria  de  pié  y  de  caballo,  según  lo  dejó 
ordenado  el  emperador  mi  señor  que  sea  en  gloria ,  cuando 
la  ganó,  de  que  ahí  también  hallareis  la  razón,  y  nos  la  en- 


8() 

víen  para  que  aquello  proveáis  ordinaria  y  anticipadamente 
en  cada  un  año,  como  dicho  es,  de  manera  que  no  liaya  falta, 
que  cuando  se  hobiere  de  meter  gente  extraordinaria ,  enton- 
ces proveeremos  de  dónde  y  cómo  se  debe  hacer,  porque  no 
es  razón  cargar  lo  de  ahí ,  estando  nuestra  hacienda  en  el 
extremo  en  que  decís  está. 

Pues  no  han  podido  ir  las  galeras  que  pensábades  enviar 
á  la  Goleta ,  ha  sido  bien  fletar  el  navio  que  scribís  para  lle- 
var las  provisiones  y  sacar  la  gente. 

Y  paréscenos  muy  bien  reducir  las  compañías  á  número 
de  diez ,  con  los  dos  mili  hombres  que  quedarcán  y  entreter- 
neis  ahí ,  que  demás  de  que  estará  mejor  gobernado ,  todas 
estas  cosas  convienen  para  que  se  excusen  gastos. 

Don  Alvaro  de  Bazan  tomó  cantidad  de  dineros  y  vitua- 
llas en  Ñapóles  y  en  Genova  y  otras  cosas  que  se  le  descon- 
tarán acá ,  y  para  esto  será  bien  que  hagáis  enviar  relación 
de  lo  que  mas  ha  rescebido  allá. 

En  lo  del  dinero  que  se  dio  á  Césaro  de  Ñapóles ,  yo  he 
mandado  scribir  á  D.  Grabiel  de  la  Cueva  y  al  embajador  de 
Genova  que  hagan  lo  que  pudieren  para  que  se  torne  á  co- 
brar todo  lo  que  mas  sea  posible ,  aunque  creo  que  habrá  di- 
ficultad, y  el  remedio  fuera  no  habérselo  entregado  á  él,  que 
ya  sabéis  cuan  mal  se  toi'na  á  cobrar  de  gente  de  guerra. 

Lo  que  os  scribimos  á  cinco  de  noviembre  pasado  sobre 
lo  que  toca  á  la  gente  que  habíades  de  enviar  á  Ñapóles  á 
cumplimiento  de  los  cuatro  mil  soldados  que  allí  suele  haber 
de  ordinario,  fué  pensando  que  llegara  á  tiempo,  pero  agora 
que  la  habéis  repartido  de  la  manera  que  avisáis,  y  se  han 
de  tornar  á  sacar  tan  presto  los  cuatro  mili  que  hay  en  aquel 
reino ,  no  hay  que  tratar  ni  menos  en  lo  de  Lombardía  y  Ger- 
deña ,  pues  todos  han  de  ir  donde  vos  estáis ,  sino  que  al 


87 

tiempo  que  placiendo  á  Dios  vuelvan  á  los  presidios ,  tengáis 
el  fin  que  os  seribimos  por  la  dicha  carta  de  cinco  de  no- 
viembre. 

Don  Joan  de  Villarroel  nos  ha  enviado  relación  de  las  ga- 
leras que  se  aplican  á  lo  del  subsidio  y  de  las  que  han  andado 
á  nuestra  cuenta,  en  el  número  de  las  xl  que  somos  obliga- 
do á  sostener ;  pero  no  declara  desdel  dia  que  les  ha  corrido 
y  corre  el  sueldo ,  y  porque  esto  es  lo  que  se  pretende  en- 
tender para  la  cuenta  del  dinero  y  ver  y  comprobar  la  que 
hay  entre  nos  y  el  dicho  subsidio ,  y  lo  que  se  nos  quedará 
debiendo  hasta  fin  del  año  pasado  de  lo  que  habemos  proveí- 
do para  que  se  satisfaga  y  cobre,  screbimos  al  dicho  D.  Joan 
que  la  vuelva  á  enviar  muy  cumplida  y  particular.  Vos  ter- 
neis  la  mano  que  se  haga  con  brevedad ,  porque  acá  está 
todo  esto  embarazado. 

Y  yo  tengo  por  cierto  que  con  el  primero  verná  como  lo 
scribís  la  otra  relación  de  lo  que  se  ha  gastado  en  la  jornada 
pasada,  y  es  menester  que  se  declare  de  qué  consignación, 
por  la  causa  que  en  el  antecedente  capítulo  se  dice. 

A  Joan  Andrea  que  se  espera  cada  dia  mandaremos  des- 
pachar con  toda  brevedad  para  que  vuelva  allá  á  servu-nos 
con  sus  galeras,  y  terne  cuenta  con  lo  que  por  él  nos  supli- 
cáis; y  al  duque  de  Saboya,  y  al  de  Florencia  y  á  la  señoría 
de  Genova  seribimos  encarescidamente  para  que  pongan  á 
punto  y  en  orden  las  suyas  para  salir  con  ellas  cuando  se  lo 
scribiéredes  de  nuestra  parte. 

Muy  bien  habéis  hecho  en  poner  y  reducir  las  galeras  de 
D.  Joan  de  Cardona  debajo  del  asiento  que  están  las  de  vues- 
tro cargo,  porque  no  hay  dubda  sino  que  en  razón  ha  de  ser 
mas  útil  y  provechoso,  y  es  muy  justo  que  se  le  den  los  quin- 
tos de  las  presas  y  cabalgadas  que  hiciere  por  la  forma  y 


"88 

manera  que  los  tienen  y  llevan  D.  Alvaro  de  Bazan  y  D.  San- 
cho de  Ley va. 

Demás  de  las  dos  mil  botas  de  vino  que  os  scribimos  en 
esa  otra  carta  que  enviéis  á  Malta ,  proveeréis  que  vayan  dos 
ó  tres  mili  vacías  en  que  puedan  tener  agua,  porque  podria 
ser  que  los  algibes  que  ordenamos  se  hagan  en  el  foso  de 
San  Telmo  no  se  acabasen  á  tiempo. 

A  Aparicio  de  Duarte  he  tenido  por  bien  de  dar  cargo 
de  dos  galeras  con  cien  ducados  de  entretenimiento  al  mes, 
como  lo  tienen  los  otros  capitanes  particulares ,  para  que  os 
podáis  demás  desto  ayudar  y  aprovechar  del ,  y  le  mandare- 
mos partir  luego ;  y  en  lo  de  Francisco  Doria  paresce  que 
hay  tiempo  para  poder  mirar  en  ello,  y  lo  mismo  se  hará  en 
lo  de  los  oficiales  del  sueldo ,  que  tenéis  mucha  razón  que 
deben  ser  hábiles  y  de  experiencia  y  diligencia,  y  Eraso  nos 
ha  informado  de  lo  que  cerca  desto  le  scribis.  De  Madrid  á 
xviij  de  enero  de  mdlxvi  años. — Yo  el  Rey.  — Francisco  de 
Eraso. 

A  D.  García  de  Toledo. 

Sobre.  —  Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. 


89 


Copia  de  minuta  de  carta  de  S.  M,  al  gran  maestre.  De 
Madrid  á  19  de  enero  de  1566. 


Le  dice  que  ha  resuelto  dar  el  mando  á  Ascanio  de  la  Corgna  de 
toda  la  gente  de  guerra  de  Malta. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1131.^ 

Demás  de  lo  que  contiene  la  otra  carta  nuestra  que  irá 
con  esta ,  se  ofresce  avisaros  que  después  de  scripta ,  por  lo 
mucho  que  yo  deseo  el  bien  y  conservación  de  las  cosas  dése 
convenio  y  religión  y  la  defensa  y  seguridad  dellas ,  me  he 
resuelto  en  enviaros  ahí  á  Ascanio  de  la  Corna  para  que  de- 
bajo de  vos  y  de  vuestro  mando  y  autoridad  tenga  cargo  de 
toda  la  gente  de  guerra  que  en  esa  isla  hubiere  de  residir  á 
mi  sueldo ,  así  por  ser  tan  principal  y  tan  platico  y  valiente 
soldado  como  sabéis,  como  porque  entiendo  que  vos  le  tenéis 
por  muy  amigo  y  que  os  será  agradable  su  compañía  y  ser- 
vicio ;  y  él  va  de  tan  buena  gana  á  emplearse  en  esto ,  que 
somos  cierto  os  habéis  de  hallar  muy  bien  con  él ,  porque 
lleva  muy  particular  cuidado  de  complaceros  y  daros  conten- 
tamiento ,  y  de  seguir  y  cumplir  en  todo  lo  que  ocurriere 
con  la  gente  de  su  cargo  las  órdenes  que  vos  le  diéredes  sin 
exceder  dellas ,  porque  yo  se  lo  he  mandado  y  él  sabe  que 
es  razón  y  se  debe  hacer  así.  Quédase  ya  poniendo  á  punto 
y  partirá  dentro  de  pocos  dias ,  y  en  el  camino  se  dará  toda 
la  prisa  posible,  lo  cual  os  he  querido  escribir  luego,  porque 
sepáis  lo  que  en  todo  se  hace  y  provee ,  y  la  voluntad  y  cui- 
dado con  que  atendemos  á  lo  que  cumple  á  esa  rehgion,  que 
es  el  mismo  que  tenemos  de  nuestras  propias  cosas.  Muy 
R.'*^  etc.  De  xMadrid  á  19  de  enero  de  1506. 


90 


Carta  or'ujinal  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo.  Madrid 
23  de  enero  de  1566. 


Le  avisa  el  nombramiento  de  Ascanio  de  la  Corgna  para  mandar 
la  gente  que  envía  á  Malta  ,  y  entender  en  la  fortificación  y  provi- 
sión de  ella. 


(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Ule.  D.  García  de  Toledo ,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Sicilia :  Después  de  lo  que  os  habernos  es- 
cripto,  que  habréis  ya  visto  ó  veréis  por  el  duplicado  que  será 
con  esta ,  nos  habernos  resuelto  en  proveer  á  Ascanio  de  la 
Corna  por  nuestro  maestre  de  campo  general  para  Malta  por 
ser  buen  soldado  y  la  experiencia  que  tiene  ,  y  que  vaya 
luego  á  aquella  plaza  y  entienda  en  la  fortificación  y  provi- 
sión della,  y  gobierne  y  tenga  á  su  cargo  la  gente  que  para 
su  defensa  enviamos  á  nuestro  sueldo.  Y  porque  se  presupone 
que  toda  la  que  allí  se  ha  de  poner  serán  ocho  mili  infantes, 
dos  mili  tudescos,  que  habernos  proveído  levante  el  conde 
Paris  de  Lodron,  y  mili  españoles  que  llevará  el  comendador 
Boniseni,  y  tres  mili  italianos  que  ofresció  el  papa  Pío  Cuarto, 
y  dos  mili  que  se  tiene  por  cierto  que  el  gran  maestre  juntará, 
así  al  sueldo,  como  de  caballeros  de  la  orden  que  allí  ocurri- 
rán ,  y  el  dicho  Ascanio  pone  duda  en  si  el  consistorio  de  car- 
denales ejecutará  lo  que  Su  Santidad  ofresció ,  y  que  el  gran 
maestre  no  podrá  levantar  la  gente  que  á  él  toca  por  las  nes- 
ccsidades  en  que  está  la  religión  y  otras  dificultades  que  po- 
drían ocurrir  specialmente  estando  el  tiempo  tan  adelante;  y 
como  quiera  que  se  le  ha  dicho  y  declarado  que  de  nuestra 
parle  no  se  puede  hacer  ni  proveer  otra  cosa ,  y  que  él  por 


94 

la  suya  y  por  medio  del  comendador  mayor  de  Castilla,  á 
quien  habernos  scripto  cerca  desto,  hagan  en  Roma  instancia 
sobre  la  provisión  de  los  tres  mili  italianos  y  con  el  dicho 
gran  maestre  para  lo  que  á  él  toca;  todavía  porque  podria 
ser  que  no  lo  pudiesen  acabar  de  concluir  y  no  seria  razón 
que  siendo  Malta  de  la  importancia  que  es  para  la  cristiandad 
y  nuestros  estados  por  falta  desto  se  pusiese  en  ventura  y 
peligro  veniendo  sobre  ella  el  armada  del  turco ,  nos  ha  pa- 
recido por  este  respecto  encargaros  mucho,  como  lo  hace-- 
raos,  que  si  lo  de  los  dichos  tres  mili  italianos  y  lo  del  maes- 
tre cesase,  ó  parte  de  ello,  lo  proveáis  como  os  paresciere  que 
mas  converná  á  nuestro  servicio  y  á  la  seguridad  de  aquella 
plaza ,  metiendo  en  ella  á  tiempo  demás  de  los  dichos  mili 
españoles  y  dos  mili  alemanes  ía  gente  que  viéredes  podrá 
bastar  para  su  defensa,  que  yo  os  lo  remito,  cometiéndolo  á 
persona  que  sea  conviniente  y  á  propósito  para  que  la  junte 
y  levante,  y  entre  y  esté  con  ella  en  la  dicha  plaza  de  Malta, 
obedesciendo  al  dicho  gran  maestre  y  al  dicho  Ascanio  de  la 
Corna. 

Aunque  con  el  correo  pasado  se  os  escribió  que  se  en- 
viaban por  cambio  al  embajador  de  Genova  docientos  mili 
escudos  de  oro,  no  pudieron  ir  sino  cient  y  cincuenta  mili, 
y  con  este  se  le  remiten  otros  ciento ,  con  los  cuales  y  los 
cincuenta  y  seis  mili  que  ordenastes  que  tomase  de  los  cient 
mil  últimos  que  el  año  pasado  se  le  enviaron,  serian  por 
todo  trecientos  y  seis  mili  ducados.  Destos  se  han  de  gastar 
y  distribuir ,  como  habéis  visto ,  para  lo  de  Malta,  y  para  la 
gente  que  se  ha  de  levantar  y  sacar  de  Lombardía,  y  para 
la  provisión  de  vituallas  que  se  han  de  meter  en  la  Goleta,  y 
si  han  de  hacer  para  la  embarcación  de  la  infantería,  docien- 
tos y  cincuenta  y  seis  mili ;  de  manera  que  quedarían  cin- 
cuenta mili ,  de  los  cuales  se  escribe  al  dicho  embajador  que 


92 

haga  lo  que  vos  le  ordenáredes ,  y  así  mirareis  si  será  bien 
convertirlos  en  la  dicha  provisión  de  vituallas  para  la  Goleta 
ó  guardarlos  y  conservarlos  para  la  paga  de  la  gente  que  es 
á  nuestro  cargo,  ad virtiéndoos  que  lo  de  acá  queda  de  ma- 
nera que  no  sabemos  lo  que  adelante  se  podrá  proveer ,  aun- 
que se  hará  todo  lo  posible,  y  por  esto  os  rogamos  y  encar- 
gamos estrechamente  que  en  todo  caso  procuréis  y  endere- 
céis que  ese  reino  se  esfuerce  á  ayudar  y  socorrer  en  esta 
presente  necesidad  como  lo  confiamos ,  que  como  os  habe- 
rnos escrito  la  misma  diligencia  se  hace  con  el  visorey  de 
Ñápeles. 

Para  los  cuatro  mili  italianos  que  han  de  ir  á  la  Goleta, 
habernos  nombrado  por  coronel  á  Chapín  Viteli  por  la  satis- 
facción que  tenéis  de  su  persona ,  y  se  envía  su  despacho  al 
duque  de  Alburquerque ,  nuestro  gobernador  del  estado  de 
Milán  y  capitán  general  en  Piamonte  y  Lombardía,  para  que 
se  le  haga  dar.  Y  porque  podría  ser  que  por  alguna  causa  ó 
ocupación  se  excusase  y  no  se  sufre  que  en  esto  haya  dila- 
ción, le  enviamos  otro  juntamente  con  él  para  que  le  tenga 
secreto ,  y  en  este  caso  y  no  en  otra  manera  le  envíe  á  Ce- 
sare de  Ñápeles.  De  lo  cual  os  habernos  querido  avisar  para 
que  lo  sepáis. 

Visto  la  falta  que  hay  de  pólvora  y  municiones,  habernos 
scripto  á  la  señoría  de  Lúea  que  dice  que  tiene  buen  recabdo 
dcUo,  encargándole  que  para  esta  presente  necesidad  nos 
presten  lo  mas  que  pudiere.  Vos  teméis  cuidado  de  apro- 
vecharos y  ayudaros  de  lo  que  desto  se  pudiere  haber,  y  asi- 
mismo en  Florencia,  sobre  lo  cual  se  ha  escripto  al  duque. 
De  Madrid  á  23  de  enero  de  15G6.  —  Yo  el  Rey.  —  Fran- 
cisco de  Eraso. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. 


m 


Copia  (le  ¡a  instrucción  que  llevó  el  conde  de  Vicanj  á 
Malla  á  los  25  de  enero  de  15G6. 

Para  Su  MajesUd. 

{Archivo  general  de  Simancas. -^Estado,  legajo  núm.  iiZ^SJ 

Lo  que  V.  S.  señor  conde  de  Vicary  ha  de  decir  al  gran 
maestre  y  á  los  de  sa  consejo  y  religión  es  lo  siguiente:    '''" 

Primeramente  con  la  modestia  que  conviene  y  V.  S. 
sabrá  darles  á  entender  cuan  grande  yeiTO  ha  sido  y  cuan 
grande  daño  podría  resultar  de  no  haberse  pasado  al  sitio  de 
Sant  Elmo :  pero  por  ser  este  negocio  ya  pasado,  tratará 
V.  S.  de  las  formas  del  remedio,  y  dígales  que  pues  han 
enviado  al  comendador  Maldonado  á  pedir  á  S.  M.  la  canti- 
dad que  falta  para  los  doce  mil  hombres ,  que  sobre  esto  no 
puedo  decir  otra  cosa  mas  de  que  ha  sido  bien  hecho  dar 
parte  á  S.  M.  dello ,  y  de  mandarle  lo  que  les  ha  parescido, 
aunque  cuanto  mas  presto  se  hubiera  hecho  fuera  mejor .  y 
que  creo  que  quien  ha  gastado  tantos  millares  de  ducados 
este  verano  pasado  por  socorrer  aquella  religión ,  no  dejará 
de  ayudarla  en  todo  lo  que  se  pudiere ,  y  que  cuanto  á  esto 
me  remito  á  la  respuesla  que  de  S.  M.  vendrá. 

Dirá  también  que  se  debe  S.  S.'  11."^  y  aquellos  señores 
acordar  del  grande  útil  que  rescibieron  el  verano  pasado  de 
Sant  Elmo  con  ser  una  fuerza  tan  pequeña  y  mal  entendida, 
pues  allí  no  solamente  perdieron  los  enemigos  el  tiempo, 
pero  perdieron  el  ánimo  y  la  mejor  gente  que  tenían ,  y  que 
de  aquel  provecho  pueden  considerar  el  útil  que  se  les  se- 
guirá de  hacer  un  fuerte  encima  de  la  montaña  ó  en  parte 
que  si  no  pudiera  abrazar  todo  el  sitio  de  la  dicha  montaña 
ni  la  meitad  della,  como  designaba  últimamente  el  ingeniero. 


94 

que  se  lome  una  parle  tal  que  basle  á  defender  los  dos  puer- 
tos y  á  sí  misma ,  y  excusar  que  Sant  Elmo  el  Viejo  no  pueda 
ser  ofendido,  y  que  esle  sitio  sea  capaz  para  mil  ó  1,500 
hombres  de  guerra ,  ó  menos ,  si  menos  se  pudiere ,  y  que 
sustentando  esto  daria  mucha  ayuda  y  favor  á  la  defensa  del 
Burgo  y  de  Sant  Miguel ,  y  que  pues  allá  paresce  que  no  hay 
tiempo  para  tomar  toda  la  montaña  ni  la  mellad  della,  como 
dice  el  ingeniero ,  que  tomando  una  parle  si  el  sitio  lo  con- 
siente podria  haber  tiempo  para  asegurarlo ,  de  manera  que 
se  asegurase  lo  de  allí  oslando  yo  fuera  del  sitio,  y  teniendo 
ellos  ingeniero  que  lo  debe  de  entender ,  no  me  queda  que 
hacer  sino  acordar  eslo  con  entera  voluntad  y  afición,  y  dar 
para  ello  todo  el  favor  de  gastadores  y  fabricadores  que  se 
me  demandaren  por  los  precios  mas  moderados  que  se  pu- 
dieren ;  y  si  respondiere  que  lo  que  en  este  fuerte  se  gastase 
no  vendría  después  á  servir  para  la  fábrica  principal  del  di- 
cho monte,  dirá  V.  S.  que  aunque  esto  fuese  ansí,  que  lo 
principal  es  guardar  la  isla  y  ampararla  y  quitar  este  año  á 
los  enemigos  la  posesión  della  ,  y  excusar  que  los  trabajos  y 
gastos  pasados  deste  verano ,  ansí  de  allá  como  de  acá ,  no 
sean  infructuosos  y  de  poca  reputación ;  y  que  los  males  que 
después  se  pueden  remediar  con  dinero  no  deben  ser  en  tal 
ocasión  puestos  por  inconvenientes ;  y  que  no  sé  yo  otro  re- 
medio mejor  para  ganar  el  tiempo  perdido  sino  lo  que  digo, 
y  que  si  saUmos  este  año  desla  necesidad ,  que  tal  inconve- 
niente se  podrá  con  facilidad  remediar.  Si  allá  paresciere 
otra  cosa,  V.  S.  diga  que  yo  habré  cumplido  con  lo  que 
debo,  así  en  el  principio  como  en  el  fin,  y  que  sin  culpa  me 
tocará  mucha  parle  del  dolor  y  desplacer  de  ver  que  no  se 
haya  puesto  remedio  en  cosa  que  le  haya  tenido  y  tenga. 

Dirá  á  Mons.'^  de  mi  parle  que  ya  sabe  que  yo  fui  de 
parecer,  conformándome  con  el  suyo,  que  se  guardase  la 


96 

ciudad  de  Malta,  y  que  la  principal  causa  que  á  ello  me 
movió  fué  ver  que  el  Burgo  y  Sant  Miguel  estaban  en  tér- 
mino que  era  forzoso  socorrer  con  número  de  gente,  y  el  útil 
questo  hizo,  S.  S^  lo  sabe,  y  del  daño  que  dello  rescibieron 
los  enemigos  está  claro  que  quedarán  escarmentados  y  ad- 
vertidos para  ser  la  primera  cosa  que  emprendan,  y  no 
siendo  la  ciudad  fuerza  que  pueda  resistir  seis  dias ,  seria 
este  año  de  contrario  parescer  del  que  el  pasado  fuí ,  y  ansí 
soy  de  opinión  que  la  dicha  ciudad  no  se  guarde ,  y  que  el 
tiempo  que  se  habia  de  gastar  en  fortificarla,  se  emplee  todo 
en  el  fuerte  que  digo ,  pues  de  poner  la  mano  en  tantas  par- 
tes, podria  nascer  no  poder  poner  ninguna  en  perficion ,  y 
demás  de  la  gente  que  allí  se  perdería ,  daria  mucho  ánimo 
á  los  enemigos  cualquier  buen  principio  que  tengan ,  y  á  los 
que  defendiesen  lo  demás  se  les  quitarla,  y  habiendo  de  estar 
lo  de  Malta  proveído  de  tal  manera  que  no  les  haya  de  entrar 
nada  con  el  medio  de  la  ciudad ,  hará  menor  falta  de  la  que 
hiciera  el  año  pasado. 

El  Gozo  no  lo  he  visto  por  estar  dentro  en  la  isla,  y  ansí 
no  sabré  decir  si  será  bueno  guardarlo  ó  abandonarlo,  y  aun 
en  esto  me  remito  á  lo  que  allá  parecerá  mas  conveniente. 


^jd^' 


96 

Carta  original  de  D.  Garda  de  Toledo  a  S.  M.,  facha  en 
Galanía  á  26  de  enero  de  1566. 

Discurre  sobre  los  medios  de  fortificar  y  guarnecer  á  Malta,  la 
Goleta  y  Sicilia — Envía  al  conde  de  Vicary  al  gran  maestre. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1130). 

S.  C.  R.  M. 

A  los  19  de  noviembre  scribi  á  V.  M.  lo  que  me  ocurria 
decir  sobre  las  cosas  de  Malta ,  y  envié  una  copia  de  una  carta 
que  antes  habia  escrito  al  maestre ,  y  por  lo  que  estonces  es- 
cribí y  agora  diré,  verá  V.  M.  que  mis  sospechas  van  salien- 
do verdaderas.  El  maestre  me  ha  enviado  aquí  al  que  fué 
general  de  sus  galeras  el  año  pasado  y  á  otros  dos  caballe- 
ros en  su  compañía  j  con  la  creencia  que  V.  M.  verá  y  con 
una  memoria  de  cosas  que  han  menester  para  la  defensión 
de  Malta  que  llegan  á  docientos  y  sesenta  mil  escudos ,  y  no 
me  paresce  la  demanda  tan  fácil  de  poner  por  obra,  que  se 
esperase  á  hacerla  estando  ya  casi  en  el  mes  de  marzo.  Hele 
respondido  lo  que  V.  M.  verá  por  la  copia  que  va  con  esta. 
Quédame  solo  de  decir  á  V.  M.  mi  opinión ,  aunque  podría 
ser  fácil  cosa  engañarme  en  ella.  Pide  el  maestre  trece  mil 
hombres  para  la  defensa  del  Burgo  y  de  San  Miguel ,  con- 
tando en  ellos  tres  mil  y  mil  gastadores  que  él  dice  poder 
sustentar ,  y  dubdo  mucho  que  estando  los  muros  por  tierra 
y  deshechas  de  la  batería  pasada  las  traviesas  y  paredes  que 
por  de  dentro  los  cubrían ,  ni  habiendo  ya  tiempo  para  levan- 
tarlas ,  y  quedando  el  sitio  subjectísimo  sin  lo  dicho  á  ser  de 
fuera  descubierto  en  muchas  partes  por  espaldas  y  lados,  que 
aquello  seria  malo  de  defender ,  y  si  viese  obligarse  á  esta 


m 

defensa  con  el  número  de  gente  que  pide  el  maestre  á  otro 
que  fuese  mas  soldado  y  lo  entendiese  mejor  de  lo  que  en 
Malta  se  entiende,  yo  quedaría  mas  quieto  y  resoluto  de  que 
V.  M.  debe  proveer  la  gente  que  les  faltase  hasta  la  canti- 
dad dicha  por  la  importancia  de  aquella  isla ;  pero  temóme 
que  no  se  obliguen  á  cosa  que  sea  añadir  mal  á  mal.  Ha  sido 
notabilísimo  error  no  comenzar  á  labrar  en  el  sitio  de  San 
Telmo ,  ansí  como  yo  lo  persuadí  al  maestre  de  palabra  y  des- 
pués por  escrito  á  los  26  de  octubre  como  V.  M.  habrá  vis- 
to por  la  copia  que  le  envié.  Porque  si  aquel  sitio  se  comen- 
zara siendo  eminente  y  superior  á  todo,  cualquier  poco  prin- 
cipio que  se  hubiera  dado  en  la  frente  teniendo  las  espaldas 
y  lados  defendidos  por  no  poder  ser  asaltados,  bastara  menor 
golpe  de  gente  para  asegurar  aquel  lugar ,  por  poco  que  se 
hubiera  hecho  en  la  fortificación ,  la  cual  estuviera  muy  ade- 
lante si  se  comenzara  cuando  de  palabra  y  por  mis  cartas  lo 
acordé;  y  siempre  temí,  como  V.  M.  habrá  visto,  que  el  no 
resolverse  á  dejarlo  ó  á  fortificarlo  era  de  notable  daño,  y  esta 
inresolucion  sola  de  no  haber  dado  principio  á  lo  dicho ,  basta 
á  traer  el  armada  del  turco,  aunque  nunca  hubiera  de  ve- 
nir, y  viniendo,  como  temo,  y  no  hallando  resistencia  en  Mal- 
ta, está  claro  el  ir  sobre  la  Goleta,  y  aun  también  lo  está  el 
subceso  que  dello  se  puede  esperar ,  tanto  mas  no  habiendo 
aun  comparescido  el  ingeniero  que  la  ha  de  fortificar.  Y  lo 
que  V.  M.  manda  que  de  aquí  se  proveyese,  está  ya  hecho 
y  dado  orden  que  se  comience  luego  á  llevar ,  no  obstante 
que  el  ingeniero  no  venga ,  pues  es  mejor  que  se  halle  allá 
que  no  que  se  esté  esperando  después,  salvo  los  gastadores, 
por  mandarlo  V.  M.  ansí,  los  cuales  tienen  ya  nombrados 
sus  cabos  para  levantarlos  á  su  tiempo.  V.  M.  mande  qué 
gente  se  ha  de  meter  en  la  Goleta,  y  qué  forma  de  defensa 
ha  de  tener,  pues  está  claro  que  faltando  la  resistencia  de 
Tomo  XXX.  7 


98 

Malla ,  no  faltará  la  ofensa  de  aquella  fuerza.  Y  para  cual- 
quiera cosa  que  V.  M.  fuere  servido  de  mandar ,  quedo  po- 
niendo en  orden  las  galeras,  para  que  con  ellas  se  puedan 
ejecutar  brevemente  sus  mandamientos,  y  pienso  para  los  10 
de  marzo  tenerlas  en  orden  para  lo  dicho  ó  para  cualquiera 
otra  cosa  que  se  ofrezca.  Suplico  íi  V.  M.  mande  luego  par- 
tir á  Juan  Andrea ,  porque  cualquiera  dilación  que  haya  en 
el  salir  las  galeras  es  muy  dañosa;  y  si  á  V.  M.  le  parescie- 
re  y  fuere  servido  que  vengan  las  de  D.  Alvaro,  se  les  po- 
drá dar  la  misma  orden. 

V.  M.  ha  de  ver  agora  si  con  todo  lo  dicho,  en  lo  cual 
me  podria  yo  engañar ,  quiere  meter  en  el  Burgo  y  en  Sant 
Miguel  la  gente  que  el  maestre  pide ,  pues  reservado  el  daño 
de  la  pérdida  de  la  gente,  que  seria  muy  grande  (la  cual 
quizás  será  Dios  servido  de  guardar) ,  no  podemos  estar  á 
peor  partido  que  á  venirse  al  fin  á  perder  aquellos  puertos. 
En  lo  uno  y  en  lo  otro  mande  V.  M.  lo  que  se  ha  de  hacer; 
y  si  V.  M.  quisiere  dar  la  gente  que  el  maestre  pide  á  mas 
cautela  podra,  siendo  servido,  enviarme  la  orden  de  á  donde 
se  ha  de  tomar  y  levantar  este  número,  y  podré  yo  con  él 
llegarme  á  Malta ;  y  si  viere  que  han  foríiíicado  y  reparado 
lo  de  allí  de  tal  manera  que  la  voluntad  ó  poca  experiencia 
no  los  haga  obligar  á  cosas  perdidas ,  sino  que  tengan  forma 
de  esperanza  de  defensa  y  de  buen  subceso,  podráseles  dejar 
la  gente ,  y  sino  tenerla  en  el  armada  para  acudir  á  donde 
V.  M.  mandase  ó  fuese  mas  menester.  Y  porque  temo  que 
esta  defensa  á  que  el  maestre  se  obliga  es  muy  peligrosa  por 
las  causas  dichas,  y  no  habiéndose  tonnado  todo  el  sitio  de  la 
montaña ,  ni  pudiéndose,  como  escribe  el  ingeniero  y  confir- 
man ellos  mismos ,  tomar  la  meitad  della ,  me  ha  parescido 
escribir  al  maestre  persuadiéndole  que  tome  aquella  parte 
que  fuere  bastante  á  ponerse  en  el  tiempo  que  queda  en  de- 


99 

fensa ,  y  para  esta  labor  le  ofrezco  todo  lo  que  de  aquí  le 
puedo  dar ,  y  si  esto  se  pone  en  perficion ,  no  solo  guardará 
los  dos  puertos ,  pero  guardará  el  castillo  que  hoy  llaman  de 
Sant  Elmo:  y  si  este  fuerte  se  acaba  y  se  guarda,  no  hay 
para  que  sustentar  el  Burgo  ni  Sant  Miguel ,  sino  abando- 
narlo y  ponerlo  todo  por  tierra ,  dejando  solo  para  su  defensa 
la  gente  que  al  maestre  le  bastase  y  hubiese  menester  re- 
medio mejor  á  los  descuidos  pasados.  Yo  no  le  veo  ni  lo  en- 
tiendo ,  y  paresciéndome  que  conviene  esto,  envío  al  conde 
de  Vicary  por  ser  persona  de  juicio  y  de  entendimiento  y  de- 
seosa de  servir ,  como  lo  ha  hecho  este  verano  y  todos  los 
pasados  en  las  ocasiones  que  se  han  ofrescido ,  al  cual  se  ha 
dado  la  instrucción  que  V.  M.  mandará  ver.  Y  no  quiero 
negar  á  V.  M.  que  no  quede  con  mucha  inquietud  de  ver  que 
dependa  una  gran  parte  de  la  defensa  y  seguridad  destos  dos 
reinos  de  la  resolución  buena  ó  mala  que  el  maestre  y  su  re- 
ligión tomaren,  porque  aun  ver  esto  en  la  propia  mano  da  tra- 
bajo ,  cuanto  mas  verlo  depender  de  las  ajenas.  Yo  no  he 
dicho  al  maestre  ni  á  los  que  acá  me  han  enviado  que  tengo 
por  dificultosa  la  defensa  del  Burgo  y  de  Sant  Miguel,  porque 
si  V.  M.  quisiere  ponerlo  á  la  ventura,  no  hay  para  que  po- 
nerles mal  ánimo,  mostrando  ellos  tenerle  bueno;  y  si  á 
V.  M.  le  paresciere  que  mi  persona  le  puede  servir  en  aquella 
isla  mas  que  en  otra  parte,  sabido  está  que  no  hay  que 
ofrescer  sino  que  cualquiera  mandamiento  destos  en  que  yo 
sepa  que  sirvo  mas ,  ha  de  ser  remuneración  para  mí. 

En  lo  de  la  Goleta  he  dicho  ya  por  otras  que  antes  que 
venga  el  armada  se  debe  de  proveer ,  ansí  de  gente  como  de 
todo  lo  demás  que  hubiere  menester ,  porque  es  cosa  impo- 
sible que  después  de  puesta  allí  la  armada  se  le  pueda  dar 
ningún  género  de  ayuda  ni  favor  por  mar  ni  por  tierra ,  si  no 
fuese  con  armada  tal  que  se  pudiese  combatir  con  la  de  los 


100 

enemigos ,  porque  aun  aventurar  una  nave  que  en  invierno 
es  peligrosísimo  cuanto  mas  en  verano ,  no  se  puede  pensar 
en  ello ,  porque  aun  después  de  llegada  por  los  bajos  hondos 
no  se  puede  amparar  ni  meter  en  bajo  de  la  fortaleza  para 
que  la  defienda ,  antes  aun  después  de  surta  corre  mayor 
peligro. 

Aunque  sé  que  el  visorey  de  Ñapóles  ha  enviado  y  envía 
á  V.  M.  los  avisos  que  hay  de  Gostantinopla,  todavía  me  ha 
parescido  á  mí  hacer  lo  mismo  de  los  que  últimamente  he 
tenido,  aunque  llegan  mas  tarde  aquí  y  á  manos  de  V.  M. 

Y  para  en  caso  que  V.  M.  mande  poner  número  de  gente 
en  Malta  ó  en  la  Goleta,  me  ha  parescido  mandar  que  se  co- 
miencen luego  á  hacer  15  mil  quintales  de  bizcocho,  peso  de 
Sicilia ;  y  porque  aqui  no  hay  dinero  de  que  hacer  diez  quin- 
tales, no  habiendo  tiempo  después  de  venida  la  respuesta  de 
V.  M.  para  poderse  poner  por  obra ,  me  ha  parescido  sacar 
á  pagar  á  V.  M.  20  mil  ducados  que  montará  esta  partida 
de  pan.  Suplico  á  V.  M.  que  la  mande  luego  cumplir ,  por- 
que cuando  no  sirviere  para  ninguna  de  las  cosas  que  digo, 
se  dará  á  las  galeras  de  particulares  que  se  pagan  del  subsi- 
dio ,  y  allá  se  podrá  cobrar  el  dinero. 

Estos  dias  he  ido  á  visitar  Augusta,  á  Zaragoza  y  á  la  isla 
de  la  Mangúese,  y  resolvídome  de  comenzar  en  Augusta  un 
fuerte  puesto  en  dos  isoletas  que  están  á  la  una  parle  del 
puerto,  como  V.  M.  verá  por  el  designo  que  quizá  irá  con 
esta,  y  sino  con  el  primero,  y  aunque  este  fuerte  no  acaba 
de  guardar  lodo  el  puerlo,  guardarle  ha  otra  torre  gruesa, 
que  pienso  hacer  en  un  secano  que  está  dentro  en  la  mar. 
Tomando  con  ella  todo  el  sitio  del  dicho  secano,  y  con  esta 
no  solo  quedará  del  todo  guardado  el  puerto,  pero  quitará 
la  comodidad  de  poder  desembarcar  los  enemigos  por  lo  mas 
flaco  á  la  ofensa  de  la  ciudad.  Esta  no  se  comenzará  ahora 


íOi 

por  ser  fábrica  que  se  ha  de  hacer  con  buen  tiempo.  Tam- 
bién irá  el  designo  de  la  dicha  isla  de  la  Mangúese ,  la  cual 
tiene  puerto  de  una  parte  y  de  otra,  como  V.  M.  verá  en  el 
designo ,  y  entrambos  á  dos  puertos  se  defenderán  y  guarda- 
rán con  un  solo  fuerte,  y  puesto  en  sitio  harto  ventajoso  y  se- 
guro, serán  estos  puertos  capaces  para  ochenta  galeras.  Hay 
quince  millas  dende  Augusta  hasta  esta  isla ,  y  guardadas 
estas  dos  partes ,  no  queda  en  todo  este  reino  lugar  á  donde 
se  puedan  meter  ni  salvar  cuatro  fustas.  La  guardia  ordina- 
ria que  habrán  menester  todos  tres  fuertes,  será  de  ciento  ó 
ciento  y  diez  hombres;  el  gasto  será  de  50  mil  escudos  en 
todos  ellos,  y  para  esta  fábrica  he  consignado  la  gabela  que 
se  puso  en  Mesina;  el  provecho  demás  de  la  seguridad  será 
muy  notable.  Quedo  viendo  si  las  pretensiones  que  el  fisco 
tiene  sobre  Augusta  son  con  fundamento.  Si  lo  tuvieren  dár- 
seles ha  ñn ,  y  sino  verse  ha  de  tasar  lo  que  Augusta  vale 
en  el  término  que  agora  está ,  y  procuraré  de  buscar  forma 
para  comprarla  por  V.  M.,  porque  no  es  sitio  ni  tierra  para 
que  esté  en  mano  de  particular. 

En  Zaragoza  hallé  muy  débiles  las  espaldas  de  los  caba- 
lleros que  miran  á  la  campaña ,  y  las  casasmatas  demasiado 
grandes.  He  mandado  engrosar  las  espaldas  tomando  todo  lo 
que  se  ha  podido  de  las  casasmatas ,  y  quedarán  los  dichos 
caballeros  con  ochenta  palmos  de  espalda ,  que  aunque  qui- 
siera darles  ciento,  no  se  ha  podido  mas.  He  hecho  terraple- 
nar la  cortina  que  hay  en  medio  destos  dos  caballeros ,  que 
estaba  sin  un  palmo  de  tierra  y  muy  peligrosa.  He  hecho  co- 
menzar un  caballero  á  la  parte  del  secano ,  porque  uno  des- 
tos  dos  que  digo  estaba  sin  defensa ,  porque  como  miraba  á 
la  parte  de  la  mar ,  parescíales  que  estaba  seguro ,  no  ha- 
biendo sino  dos  ó  tres  palmos  de  agua  que  pasar.  Este  ca- 
ballero le  hago  de  manera  que  me  pueda  servir  del  para  ha- 


i02 

cer  castillo  de  imporlancia  en  Zaragoza ,  porque  con  los  dos 
hechos  y  con  este  que  forzoso  se  hahia  de  hacer ,  aprove- 
chándome de  tres  cortinas  que  están  ya  hechas ,  con  añadir 
otra  y  hacer  un  medio  caballero  que  responda  con  este  por 
la  parte  del  lugar,  como  V.  M.  verá  en  el  designo,  quedará 
acabado  uno  de  los  mejores  castillos  que  V.  M.  tendrá  en  to- 
dos sus  reinos,  y  segura  la  ciudad  de  poder  ser  robada,  que 
es  el  peligro  que  agora  corre,  y  cuando  lo  fuese  degollados 
cuantos  en  ella  entrasen  por  el  paso  del  castillo ,  ques  en  la 
entrada  de  la  campaña,  ganarse  ha  también  el  no  tener  allí 
tan  grande  y  continua  guarnición,  y  poderme  valer  dclla  en 
otras  partes  bien  necesarias ,  ni  será  la  ciudad  trabajada  de 
grandes  alojamientos  como  lo  ha  sido  hasta  aquí.  El  castillo 
(jue  agora  hay  es  tal ,  que  ha  sido  perdida  toda  la  guardia  que 
en  él  se  ha  tenido,  fácilmente  se  encorporará  en  la  ciudad. 
Piénsele  abrir  por  de  dentro  y  dejarle  por  baluarte  de  los 
muros ,  y  este  gasto  también  está  consignado  en  la  dicha  ga- 
bela ,  y  hoy  parten  personas  diligentes  á  poner  en  orden  es- 
tas fortificaciones,  y  espero  en  Dios  que  para  la  meilad  de 
abril  será  acabado  lo  de  Augusta  y  lo  de  la  isla  de  la  Man- 
gúese, y  puesto  en  defensa  este  caballero  que  digo,  y  las 
espaldas  de  los  otros  y  terrapleno  de  la  muralla,  y  para  el 
año  que  viene  pienso  con  el  ayuda  de  Dios  que  se  podrá  aca- 
bar de  poner  en  perficion  lo  del  castillo. 

Ya  di  cuenta  á  V.  M.  á  los  12  del  pasado  como  habia 
escrito  al  embajador  Figueroa  que  de  los  100  mil  escudos 
que  V.  M.  me  remitió  últimamente  en  su  poder,  pagase  los 
56  mil  que  V.  M.  ordenaba  á  Adam  Centurión  que  tomase 
á  cambio  para  la  provisión  de  las  cosas  que  se  habían  de  en- 
viar á  la  Goleta ,  á  tal  que  no  se  siguiesen  intereses  de  cam- 
bio á  V.  M.  Háme  respondido  lo  que  V.  M.  verá  por  la  co- 
pia del  capítulo  que  va  con  esta ,  y  ansí  aquella  suma  que 


103 

no  se  ha  podido  extinguir  en  Genova  por  la  causa  que  Adam 
dice  de  haberla  cambiado  para  la  feria  de  Villalon ,  escribo 
al  embajador  que  la  entregue  á  Juan  Baptista  Lezcaro,  para 
que  aquí  sus  correspondientes  lo  paguen  al  tesorero  por  cuen- 
ta de  las  galeras  del  subsidio  que  yo  tengo  á  cargo ,  para 
poder  con  esta  cuantidad  ponerlas  en  orden  y  sacarlas  del 
puerto  para  lo  que  se  ofreciere,  como  digo,  y  presto  se  en- 
viará á  V.  M.  el  bilanco  del  rescibo  y  gasto  que  se  ha  hecho 
este  verano  pasado  con  el  armada ,  y  también  se  enviará  lo 
que  se  ha  gastado  con  las  galeras  de  España  después  que 
las  tengo  á  cargo. 

En  este  reino  hay  grandísima  falta  de  pólvora  y  de  for- 
ma para  hacerla.  Suplico  á  V.  M.  mande  proveer  aquí  á  lo 
menos  de  mil  quintales  peso  de  Castilla ,  porque  acá  no  ten- 
go forma  de  poderla  proveer,  aunque  se  queda  haciendo  la 
poca  que  se  puede,  y  si  los  quinientos  fuesen  de  arcabuz 
seria  mejor. 

También  suplico  á  V.  M.  que  mande  dende  luego  dar 
orden  de  la  gente  que  ha  de  andar  en  sus  galeras  este  año, 
y  de  adonde  se  ha  de  proveer  y  tomar ,  porque  con  esta 
provisión  excusaré  yo  de  hacer  los  gastos  que  se  solían  y 
eran  forzosos  para  la  defensa  deste  reino ,  porque  teniendo 
en  él  la  armada,  si  en  él  emprendieren  cosa  de  importancia, 
podréme  valer  de  la  dicha  gente  y  sino  asentada  que  esté 
en  otra  parte  con  la  dicha  gente  y  galeras  se  podrá  acudir 
adonde  mas  conviniere  al  servicio  de  V.  M. 

Después  de  escrito  lo  de  arriba  he  rescibido  carta  de 
Costantinopla  de  los  27  de  noviembre,  de  un  hombre  que 
el  año  pasado  me  escribió  siempre  verdad,  y  lo  que  dice  en 
sustancia  es  lo  que  V.  M.  mandará  ver  por  la  relación  que 
va  con  esta,  y  aunque  los  avisos  que  me  ha  enviado  el  vi- 
rey  de  Ñapóles  son  de  la  misma  data ,  no  conforman  los  unos 


104 

con  los  otros,  como  se  verá  en  ellos,  y  no  por  esto  se  deben 
de  dejar  de  hacer  las  provisiones  y  preparamientos  necesa- 
rios para  asegurar  lo  de  acá,  pues  de  una  hora  á  otra  vie- 
nen diferentes  avisos  y  nuevas.  Pero  V.  M.  mandará  en 
todo  lo  que  mas  le  pareciere  que  cumple  á  su  servicio ,  tan- 
to mas  que  el  que  me  ha  enviado  los  avisos  no  es  autor  tal 
que  se  pueda  ni  hombre  deba  fiarse  de  su  relación  en  cosa 
de  tanta  importancia.  Nuestro  Señor  guarde  la  vida  de  V.  M. 
por  largos  años  como  la  cristiandad  ha  menester.  De  Ca- 
tania  á  26  de  enero  1566.  — Criado  y  vasallo  de  V.  M  que 
sus  Reales  pies  y  manos  besa — Don  García  de  Toledo. 
Sobre.  A  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro  señor. 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo.  Madrid 
á  postrero  de  enero  de  1566. 

Le  dice  el  sueldo  que  ha  señalado  á  Ascanio  de  la  Corgna  y  que 
le  provea  de  todo  lo  necesario. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo ,  nuestro  capiían  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Sicilia :  Yo  envío  á  Ascanio  de  la  Corgna, 
marqués  de  Gastillon  ,  á  Malta  para  que  entienda  en  la  nueva 
fortificación  que  en  el  monte  de  San  Telmo  se  ha  de  hacer, 
y  en  la  defensa  della,  con  la  orden  que  veréis  por  las  copias 
que  van  con  esta.  Ruégoosy  encargóos  que  habiéndole  oido 
le  advirtáis  de  lo  que  os  ocurrirá  y  parescerá  para  que  lodo 
vaya  mejor  y  con  mas  brevedad  enderezado ,  que  yo  confío 


105 

hará  en  lo  uno  y  lo  otro  lo  que  de  su  persona  y  celo  que 
tiene  al  servicio  de  Dios  Nuestro  Señor  y  nuestro  se  espera. 
Y  proveeréis  en  lo  que  toca  á  las  vituallas,  municiones  y 
gastadores  y  otras  cosas  que  serán  necesarias  para  la  dicha 
fortificación ,  todo  lo  que  viéredes  que  conviene,  como  os  lo 
habernos  scripto ,  según  que  de  vos  se  espera.  Y  de  la  infan- 
tería española  que  habéis  de  juntar  haréis  dar  y  entregar  al 
comendador  Bonisene  mili  soldados  que  sean  buenos,  útiles 
y  armados  como  os  parescerá  que  serán  mas  convinientes 
para  la  defensa  de  aquella  plaza ,  dándole  la  orden  que  será 
menester  para  que  los  gobierne ,  que  en  todo  nos  haréis  muy 
agradable  placer. 

Demás  desto  enviareis  las  personas  que  os  paresciere  que 
sean  de  confianza ;  la  una  que  tenga  cargo  de  tener  el  di- 
nero para  las  pagas  que  se  han  de  hacer  á  la  dicha  gente;  y 
las  otras  para  que  les  tomen  las  muestras,  y  hagan  las  listas 
y  pongan  buen  recaudo  en  todo ,  dándoles  instrucciones  de 
lo  que  deben  de  hacer,  y  en  ellas  porneis  que  den  y  paguen 
en  cada  mas  a¡  dicho  Ascanio  de  la  Gorna  quinientos  escu- 
dos para  su  persona,  estado  y  gentiles  hombres  que  ha  de 
tener,  de  que  no  se  ha  de  tomar  muestra ,  y  ha  de  comenzar 
á  gozar  dellos  desde  primero  de  enero  deste  presente  año  en 
adelante  por  todo  el  tiempo  questuviere  y  se  ocupare  en  esto 
de  Malla. 

Asimismo  tenemos  por  bien  que  al  dicho  comendador 
Bonisene  se  le  den  ochenta  sendos  de  sueldo  cada  mes ,  ques 
lo  que  suele  llevar  un  maestro  de  campo,  y  que  goce  dellos 
desde  el  dia  que  le  entregáredes  los  dichos  mili  soldados ;  y 
allende  desto  los  alabarderos  y  oficiales  para  la  administración 
de  la  justicia  que  os  paresciere.  De  iMadrid  á  postrero  de 
enero  de  1506  años.  —  Yo  el  Rey. — Francisco  de  Eraso. 

Sobre.  —  Al  Ule.  D.  Garcia  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. 


106 


Copia  de  carta  de  S.  M.  al  conde  Parts  de  Lodron.  Madrid 
postrero  de  enero  de  156G. 

Le  manda  estar  á  las  órdenes  de  Ascanio  de  la  Corgna. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.J 

Don  Felipe  ,  etc. 

Magnífico,  fiel  y  amado  nuestro  conde  Paris  de  Lodron: 
Porque  yo  mando  ir  á  Ascanio  de  la  Gorna ,  marqués  de  Gas- 
tillon ,  á  Malta  para  que  nos  sirva  en  esta  presente  ocasión, 
así  en  lo  que  loca  á  la  fortificación ,  como  en  la  defensa  della, 
por  la  confianza  que  de  su  persona  tenemos  y  la  larga  expe- 
riencia que  tiene  en  la  arte  militar,  y  ayude  al  gran  maes- 
tre en  lo  que  se  ofresciere,  obedesciéndole  en  lo  que  le  or- 
denare; y  conviene  á  nuestro  servicio  y  al  bien  del  negocio 
que  vos,  y  los  oficiales  y  gente  de  vuestra  coronelía  obedez- 
cáis y  acatéis  al  dicho  Ascanio  de  la  Gorna  como  á  persona 
que  va  por  nuestro  mandado  á  entender  y  hallarse  presente 
en  lo  sobredicho ,  y  vos  mando  que  así  lo  hagáis  y  cumpláis 
en  todo  aquello  que  de  nuestra  parte  os  dijere  y  ordenare 
sin  que  haya  falta,  como  de  vos  lo  confio,  que  lo  mismo  en- 
vío á  mandar  al  comendador  Bonisene ,  que  lleva  á  cargo  la 
infantería  española.  De  Madrid  á  postrero  de  enero  de  1566. 

Al  respaldo  dice:  Gopia  de  la  carta  que  S.  M.  scribe  al 
conde  Paris  de  Lodron.  De  Madrid  postrero  de  enero  1566. 


407 


Carla  oriyinal  de  Felipe  2."  á  D.  García  da  Toledo.  3/ü- 
drid  1."  de  febrero  de  1566. 

Le  pide  ana  carta  descriptiva  del  reino  de  Sicilia. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  y  capitán  ge- 
neral: Ofresciéndose  cada  dia  cosas  en  que  para  la  claridad 
é  inteligencia  deltas  es  necesario  entender  las  distancias  de 
las  tierras  dése  reino  y  de  los  rios  que  tiene,  habernos  acor- 
dado que  será  conviniente  tener  aquí  una  caria  y  descripción 
del,  en  que  todo  esto  esté  muy  claro  y  distintamente  apun- 
tado; y  así  os  encargamos  que  no  hallando  hecha  alguna, 
que  sea  cual  para  este  intento  conviene ,  deis  luego  orden 
á  la  persona  que  paresciere  que  será  plática  y  intelligente 
desta  materia ,  para  que  haga  luego  una  descripción  de  todo 
ese  reino  y  se  nos  envíe  con  la  brevedad  que  fuere  posible 
á  manos  del  secretario  infrascripto.  De  ^ladrid  á  primero  de 
hebrero  1566. — Yo  el  Rey. — Vargas. 

Sobre. — Al  lile.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  y 
capitán  general  del  nuestro  reino  de  Sicilia  y  de  la  mar. 


108 


Carla  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M.,  fecha  en 
Catania  á^  de  febrero  de  1566. 

Sobre  fortificar  y  proveer  la  Goleta. 

(Archivo  general  de  Simancas.— Estado,  legajo  núm.  1150.) 

S.  C.  R.  M. 

Con  esla  va  otra  carta  en  respuesta  de  lo  que  el  duque 
de  Alba  me  advirtió  por  una  suya  de  los  treinta  del  pasado, 
en  la  cual  digo  los  inconvenientes  que  hallo  contra  el  desig- 
no de  poner  los  doce  mil  hombres  en  el  fuerte  que  se  ha  de 
hacer  en  la  Goleta,  y  si  mirase  á  lo  que  á  mí  me  toca,  podria 
excusar  de  decir  lo  (|ue  escribiré  en  esta,  certificando  á  V.  M. 
que  en  el  negocio  y  provisiones  pasadas  de  Malta,  digo  en 
las  que  se  hicieron  antes  del  socorro  último,  yo  creí  haber 
hecho  todo  cuanto  humanamente  se  podria  imaginar  y  pen- 
sar para  la  defensa  de  aquella  isla ,  las  cuales  provisiones 
después  de  la  voluntad  de  Dios  fueron  las  que  la  salvaron  y 
dieron  fuerzas  para  esperar  el  último  socorro,  y  con  haber 
hecho  esto  sin  galeras  ni  gente,  pues  no  me  quedó  en  este 
reino  un  soldado  al  tiempo  que  lo  proveí  en  todos  los  reinos 
de  V.  M.,  hasta  dentro  en  su  corte  me  daban  la  culpa  de  la 
pérdida  de  Malta.  Esto  digo  porque  lo  mismo  querrán  hacer 
de  la  Goleta,  echándome  yo  á  las  espaldas  lo  que  agora  diré, 
que  es  lo  que  me  paresce  que  conviene  al  servicio  de  V.  M., 
por  el  cual  soy  obligado  de  olvidarme  de  todos  los  otros  res- 
pectos, y  tornando  á  confirmar  los  inconvenientes  que  escri- 
bo en  la  que  con  esta  va,  digo  que  se  pueden  moderar  con 
mandarme  que  cuando  fuere  á  llevar  los  12  mil  hombres. 


Í09 

si  me  paresciere  que  no  queda  tiempo  para  la  fortificación,  ó 
se  juzgare  no  ser  conveniente  designo ,  ó  viere  que  en  otra 
parle  que  favorezca  á  la  Goleta  se  puede  hacer  el  dicho  fuer- 
te, ó  que  en  todo  ó  en  parle  se  debe  mudar  el  dicho  manda- 
miento de  V.  M.,  que  lo  haga;  y  porque  esle  juicio  rescibiré 
mucha  merced  que  no  se  fie  del  mió,  podrian  venir  en  mi 
compañía ,  para  que  todos  juntos  viésemos  lo  que  mas  con- 
venga al  servicio  de  V.  M.,  Ascanio  de  la  Goma,  Ghapin 
Viteli ,  Gabrio  Gervellon ,  el  maestro  de  campo  Julián  y  el 
Fratin,  ingeniero  que  estará  ya  acá,  yD.  Alonso  Pimentel 
que  se  halla  allí ;  y  si  paresce  no  convenir  dejar  allí  la  dicha 
gente  por  no  comportarlo  el  sitio,  ó  no  haber  tiempo  para  tal 
obra ,  podríase  dejar  el  golpe  de  gente  que  paresciese  en  la 
dicha  Goleta,  y  de  la  restante  se  podría  proveer  lo  de  Malta 
y  dejar  en  el  armada  lo  que  conviniese,  proveyendo  también 
á  Cerdeña,  y  levantar  solo  la  que  faltase  para  cumplir  con  lo 
de  Malta  y  proveer  el  armada.  Y  pues  lo  de  la  Goleta  ha  de 
ser  lo  primero  por  causa  de  la  fortificación,  si  el  sitio  lo  com- 
portare ,  podráse  suspender  el  levantar  de  la  otra  gente ,  te- 
niéndola alistada  y  nombrados  los  cabos,  y  proveído  del  di- 
nero y  victuallas ,  hasta  tanto  que  se  vea  qué  se  determina 
de  hacer  en  la  provisión  de  la  dicha  Goleta ,  en  la  cual  sé  que 
si  acaesce  alguna  desgracia  han  luego  de  decir  que  por  no 
haber  yo  puesto  allí  los  doce  mil  hombres  se  perdió ,  y  si  se 
pone  dicha  gente,  y  se  pierde  también,  dirán  que  V.  M.  me 
lo  había  remitido ,  y  que  no  la  debía  poner.  Y  siento  tanto 
ser  juzgado ,  aunque  sea  sin  razón ,  en  cosa  que  pueda  ser 
deservicio  de  V.  M.,  que  si  no  fuese  por  la  afición  dicha  de 
su  servicio,  me  sabría  bien  acau telar  destos  inconvenientes, 
y  siéntelo  mucho  mas  porque  en  la  misma  corte  de  V.  M. 
han  sido  esle  año  pasado  las  mayores  calumnias.  Esto  es  lo 
que  me  ocurre  y  paresce  hasta  agora.  V.  M.  enviará  á  man- 


lio 

dar  con  brevedad  lo  que  mas  le  paresciere  convenir  á  su 
real  servicio;  y  en  este  medio,  yo  quedo  proveyendo  todo 
aquello  que  con  poco  dinero  se  puede  hacer ,  para  ejecutar 
el  primer  designo  de  los  doce  mil  hombres,  ansí  como  es- 
cribe el  duque  que  V.  M.  manda.  Cuya  vida  Nuestro  Señor 
guarde  por  largos  años  como  la  cristiandad  ha  menester.  De 
Catania  á  2  de  hebrero  1566. — Criado  y  vasallo  de  V.  M. 
que  sus  reales  pies  y  manos  besa. — Don  García  de  Toledo. 
Sobre. — A  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro  señor. 


Carta  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M.,  fecha  en 
Catania  á  2  de  febrero  de  1566. 

Carta  citada  en  la  anterior. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  íioú.J 

S.  C.  R.  M. 

Habiéndome  escrito  el  duque  de  Alba,  por  su  carta 
de  50  del  pasado ,  que  se  quedaba  haciendo  un  despacho 
para  Italia ,  y  que,  porque  no  se  perdiese  hora  de  tiempo  en 
lo  que  con  venia  hacerse  en  servicio  de  V.  M.,  me  advirtia 
que  contiene  dicho  despacho  en  sustancia,  mandar  pro- 
veer V.  M.  de  doce  mil  hombres  para  el  fuerte  que  se  ha  de 
hacer  en  la  Goleta,  los  cinco  mil  españoles  de  los  viejos, 
tres  mil  tudescos  y  cuatro  mil  italianos ,  y  las  demás  provi- 
siones que  también  hace  V.  M.  para  ayudar  lo  de  Malta,  pre- 
suponiendo de  sacar  para  todo  esto  la  infantería  española  de 
Lombardía  y  la  de  Ñapóles ,  y  que  en  lugar  della  se  envia- 
rian  á  cada  una  destas  dos  partes  á  tres  mil  tudescos ,  y  que 


porque  se  ganase  el  tiempo  que  digo ,  y  se  pensase  en  lo 
que  mas  conviniese  hacer  en  servicio  de  V.  M.  y  apercibi- 
miento de  todas  las  provisiones  que  se  pudiesen  hacer ,  para 
que  cuando  llegase  el  despacho  de  V.  M.  se  pudiese  mejor 
ejecutar  lo  que  en  él  mandase ,  me  daba  este  aviso,  como  di- 
go, y  asi  luego  en  rescibiéndolo  he  pensado  en  todo,  y  pa- 
reciéndome  escribir  á  V.  M.  lo  que  me  ocurre  sobre  cada 
cosa  de  las  que  se  me  han  apuntado  y  despachar  luego  con 
ello  este  correo ,  porque  si  á  V.  M.  le  paresciere  que  con- 
viene enviar  á  Malta  los  italianos  y  no  los  tudescos,  ansí 
como  abajo  diré,  no  se  haga  el  gasto  de  levantarlos ,  y  ni 
mas  ni  menos,  porque  si  V.  M.  no  quiere  proveer  mas  de 
dos  mil  tudescos  para  Lombardía  y  otros  laníos  en  Ñapóles, 
que  se  excuse  también  el  gasto  de  los  dos  mil  mas ;  y  por- 
que si  á  Y.  M.  le  paresce  que  cumple  que  se  lleven  los 
nueve  mil  hombres  á  la  Goleta ,  sin  esperar  los  tres  mil  tu- 
descos por  no  perder  tanto  tiempo,  que  se  pueda  hacer,  pues 
todas  estas  cosas  que  digo  me  parescen  de  tanta  importan- 
cia que  es  de  poco  momento  el  interese  que  se  gasta  en  el 
correo  antes  que  llegue  el  que  espero  de  V.  M.  con  todos 
los  despachos ,  y  ansi  digo  que  en  lo  que  toca  á  la  defensión 
de  la  Goleta ,  estando  en  el  estado  que  está ,  y  tan  mal  re- 
parada de  fortificación,  veo  claro  que  no  se  puede  dar 
buen  remiendo  en  cosa  tan  quebrada ,  y  que  de  los  que  se 
pueden  pensar  y  discurrir  de  lejos  es  quizá  el  mejor;  pero 
no  dejaré  de  decir  á  V.  M.  los  inconvenientes  que  en  él  hav, 
que  á  mi  parescer  son  tanto  de  temer  como  los  de  la  propia 
Goleta;  y  como  V.  M.  mejor  sabe  cuando  se  ha  de  hacer 
designo  para  defenderse  en  bajo  de  trincheas  ha  de  ayudar 
mucho  el  sitio,  y  aquí  desayuda  á  mi  juicio,  ansí  por  no  es- 
tar los  pozos  del  agua  tan  cerca  de  la  Goleta  como  yo  que- 
ría para  asegurar  el  trato  de  los  unos  á  los  otros,  como  por 


ser  el  terreno  todo  arena,  y  mal  acto  para  aventurar  las 
trincheas  á  la  resistencia  de  la  artillería  que  de  fuera  las 
batiese,  y  no  solo  tiene  esta  tacha ,  pero  es  muy  fácil  para 
que  los  enemigos ,  teniendo  la  cantidad  de  gastadores  que 
tendrán ,  teniendo  al  rey  de  Túnez  de  su  mano ,  puedan  le- 
vantarles uno  ó  dos  y  mas  caballeros  que  los  descubran  de 
dentro  por  espaldas  y  lados ,  demás  desto  el  cerro  de  las  Bo- 
las y  el  otro  alto  que  está  cabe  él ,  adonde  estaban  los  espa- 
ñoles alojados  cuando  el  emperador  nuestro  señor  estuvo  allí, 
están  lejos  de  los  dichos  pozos,  que  si  se  quieren  meter  den- 
tro de  la  fortificación  como  convendría  seria  el  sitio  tal  que 
creo  que  no  bastarla  otra  dos  tanta  gente  para  guardarla; 
si  se  dejan  de  fuera  subjetan  el  fuerte  dende  el  primer  dia,  y 
los  pozos  del  agua  fuerzan  á  que  el  fuerte  no  se  pueda  alle- 
gar á  estas  dos  montañelas,  porque  se  apartarla  dellos  mas 
de  lo  que  conviene. 

La  fagina  con  que  este  fuerte  se  ha  de  hacer  hase  de 
traer  de  los  olivares ,  y  si  el  rey  de  Túnez  quiere ,  como 
creo  que  querrá,  con  la  gran  cantidad  de  caballería  y  gen- 
te que  tiene  podráselo  estorbar  ó  impedir  de  manera  que  se 
haga  poca  labor ,  tanto  mas  que  una  rama  de  olivo  que  les 
cortan  les  parece  quitarles  su  mantenimiento ,  ni  esta  es  la- 
bor tan  pequeña  cuando  bien  no  hubiese  estos  inconvenien- 
tes que  no  hayan  menester  tener  harto  tiempo  los  doce  mil 
hombres  después  de  llegados  al  sitio  para  ponerse  en  defen- 
sa, y  esto  no  lo  veo  tan  presto  ni  tan  fácil  de  hacer  que  no 
se  deba  temer  mucho  que  podria  llegar  la  armada  y  faltar- 
les el  tiempo  para  lo  dicho ,  y  si  les  faltase,  tendríalos  per- 
didos. Si  el  armada  ha  de  venir  yo  creo  que  será  para  acá 
antes  que  pase  abril ,  y  si  el  año  pasado  no  fuera  por  la  na- 
ve de  municiones  que  perdieron ,  que  fué  causa  de  detener- 
las, fueran  acá  en  este  mismo  tiempo,  ansí  que  se  puede 


H5 

bien  juzgar  el  que  tardarán  los  tudescos  en  venir  y  en  jun- 
tar y  llevar  la  demás  infantería ,  municiones  y  otras  cosas 
que  habrá  menester ,  de  las  cuales  envío  á  V.  M.  aquí  una 
memoria,  y  el  tiempo  que  les  podrá  quedar  para  su  fortiü- 
cacion ,  que  á  lo  que  yo  agora  puedo  ver ,  será  muy  corto 
para  tan  gran  empresa.  Yo  me  puedo  engañar  en  lo  dicho, 
porque  aun  estando  sobre  el  sitio  y  midiéndolo  á  palmos 
seria  fácil  cosa  errar ,  cuanto  mas  no  habiéndolo  visto  con 
este  presupuesto ;  pero  torno  á  decir  que  lo  tengo  por  peli- 
groso, ni  me  persuado  que  bastará  saber  los  enemigos  esta 
provisión  para  no  ir  allí  si  lo  tienen  determinado,  antes 
creo  que  saber  que  están  en  una  campaña  con  trincheas 
de  arena  los  podría  llevar  de  mejor  gana  sobre  ellos.  Qui- 
siera haber  visto  el  sitio  con  este  designo  para  poder  avisar 
á  V.  M.  mas  parlicularmente  y  acautelarle ,  como  á  mi  pa- 
rescer  conviniera,  porque  por  remediar  un  mal  no  se  le 
diese  compañero  de  otro  mayor.  Y  pues  he  dicho  á  V.  M. 
que  quedará  poco  tiempo  para  que  la  gente  se  fortifique, 
está  entendido  que  no  obstante  el  gasto  que  se  hará  en  le- 
vantar la  gente  tanto  tiempo  antes,  que  cuanto  mas  presto 
se  levantare  y  pusiere  será  mejor ;  y  si  se  pudiese  poner  en 
hebrero,  no  se  habría  de  esperar  á  marzo. 

En  Lombardía  y  en  Ñapóles  no  proveería  si- 
no dos  mil  tudescos  para  cada  parte,  porque  si 
el  armada  se  pusiese  sobre  alguna  plaza  de  las 
del  reino,  lo  que  no  creo,  estando  yo  tan  cerca 
podría  acudir  con  toda  la  gente  que  tuviese 
en  el  armada ,  y  pondríala  en  cualquiera  parle 
que  el  virev  quisiese ,  y  estos  dos  ó  tres  mil  que 
V.  M.  enviara  a  Ñapóles  podrían  venir  en  el  reí-  dice: 

no  por  la  vía  de  Fuime  mas  presto  á  desembar-     ..Esto  se  mire « 
car  en  las  marinas  del ,  y  á  mas  de  ahorrarse  '^'"•""*-" 
Tomo  XXX.  8 


114 

el  no  ocupar  las  galeras  entre  ellos,  el  interese  será  menor 
porque  llegarán  mas  presto. 

Si  en  lo  de  Lombardía  hubiese  novedades,  podríase  hacer 
lo  mismo ;  y  si  hubiese  mucha  comodidad  de  dinero ,  son  co- 
sas estas  que  siempre  es  mejor  echar  largo  que  corto;  pero 
habiendo  la  necesidad  que  hay ,  si  no  se  sabe  novedad  de  las 
que  por  acá  no  se  pueden  entender,  parescerme  hia  que  bas- 
tarla esta  provisión. 

Los  dos  mil  tudescos  de  Malta  yo  los  convertirla  en  otros 
tantos  italianos ,  porque  primero  que  lleguen  a  servir  costará 
mucha  cantidad  de  dinero,  demás  de  ser  mucho  mas  caros  y 
fáciles  á  enfermar ,  y  es  gente,  como  lo  vi  en  el  Peñón ,  que 
por  poco  que  se  entretengan  en  la  mar  y  padezcan  en  ella 
quedan  deshechos  por  tercio  y  les  cae  una  dolencia  que  se 
amorban  á  si  y  á  las  galeras ;  y  estos  dos  mil  los  baria  ha- 
cer á  Vespasiano  de  Gonzaga  en  Lombardía  en  bajo  de  dos 
coroneles ,  porque  dar  mucha  gente  á  uno  vi  el  año  pasado 
que  es  muy  dañoso  por  la  mezcla  de  ruines  soldados  que  traen 
en  ella ,  y  aunque  se  crezca  el  gasto  del  coronel  y  de  los  ofi- 
ciales valen  dos  por  tres ,  y  con  estos  dos  mil  italianos  y  mil 
españoles,  siendo  V.M.  servido,  enviarla  al  dicho  Vespasiano 
de  Gonzaga ,  y  á  su  elección  dejarla  los  dos  coroneles ,  por- 
que demás  de  ser  cuerdo,  sé  que  sabrá  contentar  al  maestre 
y  conformarse  con  él  en  todo ,  y  con  él  irán  muchos  hombres 
de  bien,  ansí  de  Lombardía ,  como  de  otras  partes ,  y  tam- 
bién se  le  entiende  de  forfificaciones  que  para  allí  no  dañará. 
Délos  12,000  hombres  de  la  Goleta,  paresciéndole  á 
V.  M.,  podría  tener  cargo  dellos  Marco  Antonio  Golona,  el 
cual  quiso  venir  á  servir  aquí  á  V.  M.  el  verano  pasado,  y 
por  falta  de  salud  lo  dejó  de  hacer.  Habrá  un  mes  que  me 
escribió  que  quería  venir  aquí  para  estar  mas  cerca  de  las 
ocasiones  de  poder  servir  á  V.  M. ,  y  el  cardenal  Pacheco 


115 

me  ha  escrito  lo  mismo  de  su  parle  ,  y  habiendo  dado  tan 
buena  cuenta  cuando  era  mas  mozo  de  lo  que  en  Anane  le 
encomendó  el  duque  de  Alba ,  creo  que  agora  la  dará  mejor: 
y  él  y  Vespasiano  son  personas  que  creo  que  tendrán  con- 
migo la  inteligencia  que  conviene  al  servicio  de  V.  M. 

Con  Marco  Antonio  Colona  me  paresce  se  debe  enviar  á 
Cabrio  Cervellon ,  pues  me  dicen  que  V.  M.  le  ha  rescibido 
en  su  servicio,  porque  para  allí  será  muy  útil  por  entendér- 
sele de  fortificaciones,  y  para  lo  del  artillería  no  dañaría  nada, 
y  es  persona  cuerda  y  de  servicio  y  grande  trabajador,  y  po- 
dría llevar  á  su  cargo  mil  y  quinientos  italianos,  y  Pompeo 
Colona  con  otros  tantos,  y  Fabricio  Cervellon  con  mil,  y  con 
estos  se  cumpliría  el  número  de  los  cuatro  mil  que  han  de  ir 
á  la  Goleta ;  y  pues  se  ha  de  estar  en  campaña  y  habrá  tan 
grueso  golpe  de  gente  italiana  y  española,  muy  bien  estarán 
entre  ellos  los  tres  mil  tudescos  que  V.  M.  apunta. 

Para  la  gente  que  se  hubiere  de  levantar  para  la  armada 
quedarán  Vicencio  Vitelli,  Jorje  Doria,  Paulo  S/*  Flor,  Fran- 
cisco Colona,  Pedro  Antonio  de  Luna;  y  para  Cerdeña  Gismun- 
do  Gonzaga,  ó  otra  persona  cual  á  D.  Grabíel  le  paresciere. 

Cuanto  á  los  coroneles  tudescos  no  nombraré  ninguno, 
pues  V.  M.  y  el  duque  de  Alba  los  conocen  mejor  que  nadie. 

De  la  victualla  necesaria  para  la  gente  que  ha  de  entrar 
en  Malta,  me  paresce  mejor,  y  así  se  lo  escribiré ,  que  se  en- 
cargue el  maestre  della ,  dándole  de  aquí  franco  de  derechos 
todo  lo  que  hubiere  menester  para  la  gente  que  V.  M.  pu- 
siere allí,  y  con  esto  no  se  entra  en  gastos  de  oficiales  y  mu- 
nicioneros ,  y  así  lo  tractarán  como  cosa  propia  sin  que  se 
desperdicie  la  victualla ;  y  todo  lo  que  montare  lo  que  se  les 
diere  de  comida,  me  obligaré  yo  á  pagarlo  al  maestre,  lo  cual 
se  descontará  de  lo  que  hubieren  de  rescibir  los  dichos  sol- 
dados de  su  sueldo. 


116 

Por  este  memorial  podrá  V.  M.  ver  lo  que  á  mi  juicio  es 
menester  proveer  para  el  fuerte  de  la  Goleta ,  y  las  partes 
á  donde  conviene  hacer  dicha  provisión,  podrá  V.  M.  des- 
minuir  ó  acrescentar  lo  que  mas  fuere  su  servicio.  Lo  prin- 
cipal que  es  el  bizcocho  y  harina ,  yo  he  despachado  ya  per- 
sonas que  vayan  á  comprar  el  trigo  para  poner  mano  en  ello, 
y  ni  mas  ni  menos  el  vino,  arroz  y  legumbres ;  lo  demás  lo 
haré  secrestrar  para  que  esté  á  punto  de  poderse  tomar 
cuando  V.  M.  fuere  servido  de  proveer  el  dinero.  Para  el 
trigo  me  valdré  de  la  partida  que  no  pudo  destinguir  (sic) 
Adam  Centurión  que  monta  31,000  escudos,  y  por  no  ha- 
bérmelos aun  remitido  de  Genova  ni  querídolos  enviar  á  pa- 
gar allá  por  causa  de  los  intereses ,  procuraré  con  mercade- 
res que  me  acomoden  aquí  dellos  hasta  poderlos  traer  con 
galeras ,  ó  por  cambio  si  la  moneda  hiciese  baja  del  término 
en  que  agora  está. 

También  procuraré  con  ellos,  si  lo  pudiere  acabar,  que 
me  den  otros  20,000  hasta  tanto  que  venga  la  provisión  de 
los  que  V.  M.  mandará  proveer  para  lo  que  se  ha  de  hacer 
y  levantar;  y  en  todo  lo  que  aquí  se  pudiere,  V.  M.  esté 
quieto,  que  aunque  es  ya  tarde  para  hacer  tan  gruesa  can- 
tidad de  bizcocho ,  que  se  pondrá  toda  la  diligencia  posible. 

Para  lo  que  se  ha  de  traer  de  Ñapóles  escribo  al  virey  lo 
que  V.  M.  mandará  ver,  y  le  envío  la  memoria  de  todo  lo 
que  allí  se  ha  de  proveer  para  que  en  todo  se  gane  el  tiempo 
que  el  duque  de  Alba  me  escribe. 

También  envío  en  Cerdeña  para  que  se  compre  la  carne 
salada,  la  cual  traerán  las  galeras  que  fueren  á  lomar  la  in- 
fantería por  ser  allí  mas  barata  que  en  otra  parte. 

Si  por  caso  no  se  hubiese  de  dejar  el  golpe  de  gente  que 
se  escribe  en  la  Goleta ,  en  tal  caso  la  provisión  de  la  vitua- 
lla que  estará  ya  hecha  se  podrá  enviar  á  Malta  y  que  la  co- 


117 

ma  la  gente  que  V.  M.  allí  metiere ,  descon- 
tándosela de  sus  pagas  por  irnos  deshaciendo 
de  tan  grueso  golpe  de  municiones  como  será 
forzoso  hacer,  aunque  son  cosas  en  que  se  per- 
derá poco. 
tradeiRe  ^  temicudo  quc  de  España  no  podrá  venir 

d¿ce:          tanta  pólvora  de  arcabuz ,  scribo  al  embajador 
"Esto  ha  sido  bien  ¿g  Géuova  QUC  vca  dc  entretener  toda  la  que 

y  asi   hubiese  aüi  t  ^ 

mucha."  ,^]jj  jm^iere,  ó  hacerla  hacer  de  nuevo,  dando 

orden  en  que  por  lodo  marzo  esté  hecha  toda 
la  que  fuere  posible  hasta  llegar  á  esta  cuan- 
tidad ,  y  esto  también  se  pagará  del  dinero  que 
V.  M.  mandará  proveer  como  lo  escribo  dende 
agora  al  embajador,  y  que  él  mismo  dé  aviso 
á  V.  M.  de  que  cuantidad  podrá  tener  pro- 
veída para  el  dicho  tiempo;  y  porque  haya 
mayor  diligencia,  así  en  el  embarcar  de  la  gen- 
te como  en  la  navegación  de  las  galeras ,  iré 
yo  mismo  en  ellas  para  solicitar  lo  uno  y  lo 
otro;  y  si  los  tudescos  se  han  de  esperar,  en 
el  tiempo  que  tardaren ,  seria  de  opinión  que 
se  llevasen  los  nueve  mil  hombres,  porque  con 
ellos  se  comenzarla  la  labor  del  fuerte ,  y  que 
no  se  esperase  á  su  venida  para  sacar  los  es- 
pañoles de  Ñapóles  y  Lombardía  que  allí  se  hu- 
biesen de  meter.  Tomarse  han  las  naves  nece- 
sarias para  llevar  las  vituallas  y  otras  cosas 
que  no  podrán  ir  en  las  galeras;  y  si  esto  no 
pudiere  ir  todo  de  un  golpe,  harán  las  galeras 
dos  viajes ,  porque  se  hará  con  mas  brevedad 
y  menos  gasto  que  tomar  gruesa  cuantidad  de 
naves  para  hacerlo  de  una  vez.  Y  Nuestro  Se- 


118 

ñor  guarde  por  largos  años  la  vida  de  V.  M.  como  la  cris- 
tiandad ha  menester.  De  Galanía  á  2  de  hebrero  de  1566. 
—  Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos 
besa. — Don  García  de  Toledo. 

Sobre. — A  la  S.  G.  R.  M.  del  Rey  nuestro  señor. 


Carta  orifjinal  de  D.  García  de  Toledo  al  ilaüre  señor  el 
señor  Francisco  de  Eraso,  fecha  en  Catan ia  á  2  de 
febrero  de  1566. 

Se  queja  de  que  S.  M.  no  le  haya  hecho  ninguna  merced  des- 
pués de  treinta  años  de  servicio — Dice  las  disposiciones  que  ha  to- 
mado para  proveer  la  Goleta. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1150.^ 
Ille.  Señor  : 

Yo  he  rescibido  y  respondido  á  la  carta  de  vj  de  diciem- 
bre, que  me  trujo  el  criado  del  conde  de  Módica,  y  siempre 
que  por  cualquier  via  me  la  hiciere  v.  m.  en  escribirme  la 
recibo  muy  grande,  y  sé  muy  bien  que  en  lo  que  toca  á  la 
autoridad  que  debe  tener  el  que  tiene  el  cargo  ó  cargos  que 
tengo ,  que  v.  m. ,  ansí  por  servicio  de  S.  ¡VI. ,  como  por  ha- 
cerme á  mí  merced,  tendrá  siempre  la  mano;  y  pues  v.  m. 
ha  hecho  fée  á  S.  M.  de  lo  que  en  este  particular  pasó  en 
Barcelona,  creo  que  S.  M.  lo  mandará  remediar;  y  cuando 
no,  si  él  se  quiere  olvidar  de  su  particular  servicio,  muy 
fácil  cosa  será  olvidarme  yo  de  lo  que  me  puede  tocar, 
pues  no  me  va  otra  cosa  en  ello  sino  deseo  de  poder  servir 
mejor.  También  he  rescibido  mucha  merced  de  la  memoria 


119 

que  V.  m.  ha  tenido  de  lo  que  toca  al  conde  de  Altaraira, 
porque  no  querría  que  los  que  me  siguen  sirviendo,  como  el 
conde  sirve,  perdiesen  el  tiempo  y  destruyesen  su  hacienda, 
y  ansí  me  hará  v.  m.  merced  de  soUcitarlo.  En  extremo  he 
holgado  de  saber  que  lo  de  la  visita  se  vaya  acabando ,  y 
confieso  á  v.  m.  que  cada  vez  que  pienso  en  ello  me  intris- 
tezco  de  nuevo,  porque,  dejado  aparte  el  particular  de  v.  m., 
ver  trabajos  tales  en  persona  de  quien  tanto  ha  servido ,  me 
parescen  términos  para  dar  poco  contentamiento  á  los  que  lo 
andan  haciendo:  y  pues  entro  en  esta  plática,  no  negaré  que 
no  me  parezca  bien  lo  que  S.  M.  hace  conmigo,  que  es  espe- 
rar tercera  ó  cuarta  ocasión  para  hacerme  merced ,  pues  no 
la  han  aun  merescido  servicios  de  treinta  años ,  y  por  remate 
dellos  dos  jornadas  como  las  pasadas.  Pero  dejando  esto 
aparte ,  y  hablando  desto  que  agora  se  apareja ,  digo  que 
verá  v.  m.  lo  que  escribo  á  S,  M.  sobre  la  materia ,  de  que 
el  duque  de  Alba  me  advierte ,  y  la  copia  de  su  carta  envío 
á  V.  m.  porque  son  diferentes  en  el  número  de  los  soldados 
de  lo  que  v.  m.  me  escribe,  porque  el  duque  dice  tres  para 
lo  de  Malla  y  v.  m.  seis,  ansí  como  lo  mandará  ver  por  la 
copia  de  su  mismo 'capítulo  de  su  mano.  Paso  confusamente 
por  esto,  porque  si  fuese  error  por  parte  de  v.  m.,  no  se 
mirase  allá  en  ello. 

llénenme  tan  escarmentado  los  juicios  que  en  esa  corte 
se  hacían  de  mí  este  año  pasado,  y  saber  cuan  fácil  es  de  im- 
primir en  todas  partes  cualquiera  murmuración ,  aunque  sea 
sin  juicio  y  sin  inteligencia ,  que  me  hacen  andar  mas  reca- 
lado que  el  conde  de  Olivares ,  como  v.  m.  lo  verá  por  la 
segunda  carta  que  escribo  á  S.  M. ;  pero  parésceme  con  ella 
poner  remedio  en  los  inconvenientes  que  podrían  suceder.  Y 
por  llevar  adelante  el  recatamiento  dicho,  es  bien  que  yo  sepa 
si  contentándose  S.  M.  que  quede  á  elección  mia  y  de  las  per- 


120 

sonas  que  nombro  en  dejar  ó  no  dejar  la  gente  en  la  Goleta, 
después  de  visto  el  sitio,  cuando  estuviésemos  diferentes  de 
opinión,  si  quiere  S.  M.  que  yo  concurra  con  la  mayor  par- 
le, aunque  en  tal  caso  yo  me  confirmase  con  la  menor,  por- 
que yo  pueda  ejecutarlo  con  mas  satisfacción  de  S.  M.  y  des- 
canso mió. 

A  S.  M.  envío  la  memoria  de  lo  que  será  menester  pro- 
veer para  la  Goleta ,  que  es  harto  mas  de  lo  que  seria  me- 
nester, ansí  para  lo  que  toca  á  la  hacienda,  como  para  el  poco 
tiempo  que  queda  para  proveerlo.  Quédase  haciendo  lo  que  se 
puede ,  como  v.  m.  verá  por  mis  cartas.  La  tablazón  y  made- 
ramen que  va  en  la  dicha  memoria  es  forzosa  para  hacer  al- 
gunas cofas  para  meter  la  vitualla  y  munición,  porque  alguna 
fuerza  de  agua  no  se  la  destruya ,  aunque  en  Berbería  acaes- 
ce  pocas  veces ;  y  para  acoger  dolientes  y  heridos  del  hos- 
pital parésceme  que  hay  poca  diferencia  desla  suma  á  la  que 
v.  m.  tasaba  para  este  efecto;  bien  es  verdad  que  en  esta 
cuenta  no  va  nada  de  lo  que  toca  á  Malta  por  la  causa  que 
á  S.  M.  escribo ,  ni  en  este  reino  se  puede  hacer  mayor  cuan- 
tidad de  bizcocho  por  no  haber  tiempo  para  ello.  Escribo  al 
virey  de  Ñapóles  que  mande  hacer  allí  seis  mil  quintales  de 
bizcocho,  porque  si  en  Malla  se  pidiese  que  pueda  estar 
hecho  con  tiempo ,  lo  cual  se  podrá  cargar  al  sueldo  de  la 
infantería  que  S.  M.  pusiere  allí,  y  sino  lo  podrán  comer  las 
galeras  de  aquel  reino. 

Para  que  v.  m.  vea  que  no  se  ha  perdido  ni  se  pierde 
tiempo  en  lo  que  S.  M.  mandó  que  se  proveyese  á  la  Goleta, 
le  envío  con  esta  una  carta,  que  uno  de  los  hombres  que  en- 
vié á  la  solicitud  dello  escribe  á  mi  secretario;  pero  no  se 
pueden  en  invierno  abreviar  mas  estas  cosas  que  han  de  ir 
por  mar  de  lo  que  los  tiempos  permiten.  En  Gatania  á  2  de 
hebrero  de  1566. 


12Í 

De  su  letra. 

Gran  bien  seria  para  todos  la  preñez  de  la  reina  nuestra 
señora:  plega  á  Dios  que  sea  verdad.  Este  reino  está  mise- 
rísimo, como  escribo  á  S.  M. ,  y  imposibilitado  de  poder  ser- 
vir con  lo  que  S.  M.  escribe;  pero  por  cien  mil  escudos  creo 
que  los  darán  y  con  harto  trabajo  se  podrían  exigir.  —Ser- 
vidor de  v.  m. — Don  García  de  Toledo. 

Sobre  de  la  carta. — Al  Ule.  señor  el  señor  Francisco 
de  Eraso,  del  Consejo  de  S.  M.  y  su  secretario.  Madrid. 

Memoria  (1)  que  envió  el  limo,  duque  de  Alba  á  don 
Garata  de  Toledo. 

Lo  que  paresce  se  debe  hacer  para  la  defensa  de  Malta ,  en  caso 
que  la  armada  venga  sobre  ella ,  es  lo  siguiente : 

La  defensa  de  Malta  se  ha  platicado  se  podría  hacer  en 
una  de  las  maneras  siguientes :  tornando  á  reedificar  y  for- 
tificando el  Burgo  y  San  Miguel  y  poniéndoles  dentro  la 
gente  conveniente  al  tamaño  de  las  plazas ,  ó  fortificando  el 
monte  de  San  Telmo,  y  bien  fortificado,  guarneciéndole  de 
la  gente  necesaria  para  tal  efecto,  que  se  juzga,  estando  for- 
tificado de  propósito  como  debria,  seria  de  mil  y  quinientos 
á  2  mil  soldados.  Paresce  que  en  el  primer  cabo  de  fortificar 
al  Burgo  y  Sant  Miguel  sea  cosa  implaticable,  así  por  el 
mucho  tiempo  que  se  debria  de  poner  en  ella ,  como  por  el 
mal  sitio  que  la  una  y  la  otra  plaza  tienen  por  la  superiori- 

(1)  Este  es  el  memorial  de  que  habla  el  duque  de  Alba  en  la 
calla  inserta  ea  la  pág.  47  de  este  tomo. 


122 

dad  que  las  colinas  de  fuera  tienen  á  las  dichas  plazas ,  de 
manera  que  si  bien  estuviesen  llenas  de  gente ,  el  artillería 
de  fuera  bastaría  á  deshacerla  toda. 

La  fortificación  del  monte  para  hacerse  como  debria  para 
que  la  gente  dicha  la  defendiese,  siendo  el  tiempo  tan  ade- 
lante, es  cosa  asimismo  imposible  é  implaticable,  de  manera 
que  viendo  las  dificultades  que  hay  en  fortificarse  el  Burgo 
y  San  Miguel,  y  la  imposibilidad  de  acabar  lo  del  monte, 
será  menester  que  con  gente  se  suplan  las  faltas  é  inconve- 
nientes que  en  la  una  y  otra  parte  están  dichos ,  y  se  pongan 
seis  mil  infantes  sin  los  aventureros  y  caballeros  de  la  orden 
que  se  habrán  de  hallar  allí  este  verano. 

Son  tres  partes  donde  esta  gente  se  puede  poner  á  la  de- 
fensa :  la  una  dentro  del  Burgo  y  San  Miguel;  la  otra ,  ó  sa- 
liéndose á  la  campaña  y  trincheándose  en  ella,  quedándoles  á 
las  espaldas  dicho  Burgo  y  San  Miguel  para  poderse  valer  de 
los  algibes  y  victuallas  que  ternian  en  las  dichas  dos  plazas. 
La  tercera  haciendo  una  trinchea  corlada  en  el  monte  con 
su  baluarte  en  medio ,  formado  del  mismo  terreno ,  y  dos 
medios  á  los  lados ,  con  quien  se  responda,  y  de  quien  haya 
de  tomar  la  defensa,  cortada  esta  trinchea  en  la  frente  que 
va  á  tierra  firme  por  lo  mas  eminente ,  á  donde  el  terreno 
comienza  á  calar ,  y  este  corte  ha  de  ser  con  un  foso  cuanto 
hondo  y  ancho  se  pudiere,  según  el  tiempo  y  la  gente  se 
metiere  á  labrar  en  él,  y  paresce  que  con  poco  que  se  ahonde 
y  ensanche,  con  lo  que  de  dentro  se  podrán  levantar,  y  con 
lo  que  de  fuera  cala  el  terreno  y  con  tan  gran  golpe  de  gente 
como  el  que  allí  se  pondrá,  pueden  estar  con  toda  seguridad 
y  defenderse  con  gran  ventaja,  no  pudiendo,  según  la  rela- 
ción, ser  acometidos  por  otra  parte. 

El  poner  este  golpe  de  gente  dentro  de  las  dos  plazas, 
por  lo  de  arriba  está  dicho  el  inconveniente  que  en  ello  ha- 


i23 

bria ,  y  visto  claramente  que  conviene  salirse  fuera  con  la 
trinchea  dejándolas  á  las  espaldas ,  por  ser  el  pais  de  monta- 
ñas y  que  no  podrian  ocupar  de  la  campaña  tanta  parte  que 
no  les  quedase  de  fuera  siempre  á  los  enemigos  sitios  emi- 
nentes y  superiores  al  que  se  podria  elegir  para  poner  esta 
gente,  no  paresce  que  podria  defenderse  allí  por  muchos 
dias ,  y  que  al  fin  habian  de  ser  forzados ,  cuando  los  ene- 
migos, teniendo  las  fuerzas  que  se  esperan,  porfiasen  la  em- 
presa. Habiendo,  pues,  en  estos  dos  las  dificultades  dichas, 
resta  que  sea  el  monte  el  que  se  haya  de  defender ,  y  á  donde 
esta  gente  conviene  que  se  recoja.  Para  lo  cual  se  entienden 
las  dificullades  siguientes :  ser  piedra  todo  donde  se  ha  de 
hacer  la  trinchea,  dificultosa  de  labrar,  no  haber  población 
ninguna  donde  poder  recoger  municiones ,  victuallas  y  hos- 
pital, la  falta  del  agua  que  no  ternán  que  beber.  A  lo  de  la 
trinchea  se  dice  que  siendo  el  golpe  de  la  gente  tan  grande 
que  se  encerrará  allí ,  y  la  eminencia  de  lo  de  dentro  á  lo  de 
fuera,  como  está  dicho,  que  no  podrán  ser  fastidiados  ni  do- 
minados con  caballeros  de  fuera,  ni  acometidos'por  otra  parte 
que  por  esta  frente,  cualquiera  trinchea  bastará  teniendo  las 
calidades  dichas ,  y  siendo  el  trecho  que  se  ha  de  guardar 
tan  corto  que  no  podrian  combatir  con  mas  gente  por  de 
fuera  que  la  que  podrán  llegar  á  la  defensa  por  dentro. 

En  lo  de  la  habitación  para  lo  que  está  dicho ,  se  ha  de 
hacer  cuenta  que  están  en  campaña  y  usar  de  pabellones  y 
ranchos  y  de  las  otras  cosas  de  que  se  acostumbra  valer  en 
campaña,  que  los  enemigos  no  ternán  mas  poblado  que  ellos, 
tanto  mas  no  pudiendo  tener  sus  galeras  en  el  puerto  donde 
las  tuvieron  después  que  ganaron  á  San  Telmo  sino  muy  le- 
jos de  su  alojamiento,  y  con  mucha  descomodidad  de  los  que 
estarán  en  tierra. 

El  agua,  según  la  relación  se  ha  hecho,  en  San  Telmo 


124 

hay  cislerna  que  bastará  á  dar  de  beber  á  la  gente  dicha  por 
un  mes.  En  Santangel  dicen  que  hay  otra  que  podrá  suplir 
otro  mes,  y  que  esta  no  se  puede  quitar,  haciéndose  puente 
como  la  tenian  hecha  entre  el  Burgo  y  San  Miguel. 

Demás  desto ,  dicen  que  en  el  foso  de  San  Telmo  se  po- 
dría hacer  cisterna ,  haciéndosele  su  vuelta  y  cerrando  por  la 
una  y  otra  parte.  Esto  paresce  que  seria  cosa  conveniente  y 
necesaria  hacerse ;  pero  no  en  una  sola  pieza  sino  repartida 
en  muchas,  porque  siendo  pequeñas,  tanto  mas  presto  se  en- 
jugarla la  obra  para  poder  echar  el  agua ;  y  si  una  ó  dos  sa- 
liesen con  algún  pelo  ó  grieta  por  donde  se  fuesen,  quedarían 
las  otras  para  servir ,  y  haciendo  diligencia  con  barcas ,  se- 
gún la  relación  que  han  hecho ,  se  podrían  enchir  del  agua 
de  la  Marza ,  y  porque  si  esto  no  saliese  para  crescer  la  be- 
bida y  p^ra  sustentamiento  y  contentamiento  de  la  gente  se 
podrían  poner  en  el  dicho  fuerte  dos  mil  botas  de  vino ,  que 
juntándose  con  el  agua  de  San  Telmo  y  Santangel,  se  tiene 
que  seria,  dándose  por  regla,  suficiente  bebida  para  el  tiem- 
po que  SQ  puede  hacer  cuenta  durarla  la  necesidad.  Pues 
visto  todo  esto,  la  resolución  que  á  S.  M.  le  paresce  se  debe 
hacer  es  el  tallo  del  monte  en  la  forma  dicha ,  valer  de  las 
tiendas  y  barracas  para  las  municiones ,  hacer  la  diligencia 
sobre  el  agua  y  sobre  el  vino  dicho ,  y  que  la  gente  en  efecto 
se  ponga  la  dicha ,  y  que  estos  hagan  su  trinchea  delante  el 
Burgo  y  San  Miguel ,  y  la  defiendan  allí  al  enemigo  y  le  ha- 
gan gastar  todo  el  tiempo  que  buenamente  se  pudieren  sos- 
tener, y  apretados  se  retiren  á  defender  el  monte,  en  el  cual 
haciendo  fundamento  *ser  verdadera  la  relación  que  se  ha  he- 
cho ,  se  tiene  por  cierto  se  defenderá  con  servir  á  Dios,  y  á 
S.  M.  y  á  la  religión,  honrándose  los  que  allí  estuvieren,  y 
sin  que  sea  menester  que  el  armada  de  S.  M.  se  torne  á 
aventurar  para  socorrerlos  como  hizo  el  año  pasado. 


i25 


Carta  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M.  Catania  8  de  fe^ 
hrero  de  1566. 

Se  queja  de  que  los  caballeros  de  Malta  echen  la  culpa  á  los  de- 
más de  no  haberse  fortificado  aquella  isla  luego  de  idos  los  turcos. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  4150J 

! 

S.  C.  R.  M. — A  los  dos  del  presente  scribí  á  V.  M.  largo 
y  por  esta  causa  no  lo  seré  en  esta,  con  la  cual  envío  á  V.  M. 
la  relación  que  el  conde  de  Yicary  trae  de  las  cosas  de  Malta 
en  respuesta  de  lo  que  llevó ,  y  también  va  la  carta  que  rae 
ha  escrito  el  maestre  y  Consejo,  que  me  paresce  harto  mas 
corta  en  tiempo  que  habia  de  ser  mas  larga  que  la  oferta  que 
me  hicieron  los  tres  comendadores  que  aquí  vinieron ,  y  que 
debe  de  haber  hecho  á  V.  M.  el  comendador  Maldonado.  Por 
mi  carta  de  los  18  de  noviembre,  como  ya  escrebí,  podra 
ver  V.  M.  cuan  poco  me  he  engañado  en  la  opinión  que  des- 
tas  cosas  de  Malla  tenia.  Parésceme  que  todas  las  palabras 
que  dicen  y  apuntan  van  encaminadas  á  querer  echar  sus 
culpas  sobre  tardanzas  y  espaldas  ajenas;  pero  la  total  y  ver- 
dadera ruina  desta  obra  ha  sido  no  haberla  comenzado  desde 
el  dia  que  la  armada  se  fué,  y  si  fallaba  el  ingeniero  del  du- 
que de  Florencia  ó  lardaba  el  del  papa  mas  cerca  le  tenían 
aquí,  pues  el  sitio  de  la  montaña  de  San  Telmo  es  de  ma- 
nera que  ningún  ingeniero  le  podia  errar,  tanto  mas  que  el 
mismo  ingeniero  del  duque  de  Florencia  que  dice  que  esta- 
ba malo,  ya  habia  estado  allí  dos  ó  tres  años  habia,  y  acon- 
sejádolesque  tomasen  aquel  sitio,  de  manera  que  no  fallaba 
sino  el  comenzarlo,  pues  el  consejo  estaba  dado.  Lo  que 
agora  hacen  en  el  castillo  viejo  de  San  Telmo,  yo  lo  tengo 


126 

por  cosa  de  muy  poco  fundamento  y  defensa ,  por  estar  todo 
subjeto  á  la  altura  de  la  montaña;  y  si  á  lo  menos  lo  alto  della 
no  se  defiende,  mal  se  podrá  guardar  lo  bajo.  El  fortificar  á 
San  Angelo  habiendo  de  abandonar  el  Burgo  es  cosa  de  risa, 
porque  no  hay  defensión  en  él  para  ocho  dias  por  mas  que 
hagan,  no  habiendo  lugar  en  el  sitio  del  dicho  castillo  de  San 
Ángel  para  poder  hacer  cosa  que  le  defienda ;  y  por  la  caria 
del  maestre  y  del  Consejo  veo  que  dicen  que  estos  dos  cas- 
tillos no  se  pueden  aun  defender ;  y  certifícanme  otros  que  lo 
que  en  esto  hacen  es  por  no  perder  del  todo  la  posesión  de 
Malta.  Lo  que  el  duque  de  Alba  dicen  que  decía  que  por  abre- 
viar la  obra ,  pues  no  habia  tiempo  para  hacer  baluartes  rea- 
les en  la  frente  de  la  montaña  de  San  Telmo,  aunque  en  Mal- 
ta ha  sido  tenido  en  poco ,  no  me  páresela  á  mí  mal ,  porque 
aunque  la  tijera  hace  los  ángulos  agudos ,  y  por  esta  causa 
imperfectos ,  esto  fuera  cuando  se  hubieran  de  hacer  de  fá- 
brica ;  pero  habiéndose  de  sacar  de  la  peña ,  la  cual  es  dul- 
císima de  labrar,  no  era  lacha  tan  importante  que  no  se  pu- 
diera comportar  y  salir  harto  mejor  della  que  no  se  saldrá 
de  la  fortificación  de  San  Angelo  y  San  Telmo.  Pero  parés- 
ceme  que  ha  habido  poca  voluntad  en  la  religión  de  estar 
este  año  en  aquella  isla,  y  ansí  aprovechó  poco  habelles  acor- 
dado y  dado  expedientes  y  modos  para  ello;  si  ellos  siguie- 
ren este ,  como  creo  que  lo  harán ,  según  el  conde  de  Vi- 
cary  dice ,  vea  V.  M.  si  es  servido  que  se  les  dé  el  socorro 
del  dinero  que  V.  M.  tenia  determinado,,  según  el  duque  de 
Alba  me  escribió,  y  cierto  de  la  inresolucion  del  maeslre 
en  este  caso  nasce  tenerme  cada  dia  confuso  en  el  mismo 
negocio ,  porque  andando  ellos  mudando  opiniones ,  como 
se  verá  por  las  ofertas  que  digo ,  y  por  esta  firmada  que 
dejaron  aquí  los  tres  comendadores  que  me  envió ,  no  hay 
quien  pueda  estar  firme  en  las  suyas,  ni  poderlas  decir  por 


127 

escrito,  en  especial  siendo  el  tiempo  tan  breve  para  los  re- 
medios. Hame  enviado  el  maestre  copia  de  una  carta  que 
le  escribió  el  comendador  Boninseñe,  la  cual  me  ha  pares- 
cido  enviar  á  V.  M.  para  que  entienda  mejor  la  relación  del 
conde  de  Vicary. 

Scríbeme  agora  el  maestre  que  ha  querido  hacer  gasta-* 
dores  en  Sicilia,  y  que  no  los  ha  hallado.  Yo  le  respondo  que 
si  me  hubiera  á  mí  avisado  dello  que  se  los  hubiera  hecho 
haber,  aunque  no  quisieran  ir,  como  lo  haré  agora  y  siem- 
pre que  rae  los  pidieren.  En  Gatania  á  8  de  hebrero  i 566. — 
Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. 
— Don  García  de  Toledo. 

Sobre  de  la  carta.  — A  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro 
señor. 

La  carta  original  de  los  tres  comendadores ,  w  oferta  que 
hicieron  acerca  de  guardar  á  Malla. 

III."°et  Ecc.™»  S.'  :  Volendo  V.  Ecc.''  sapero  se  Mon.' 
111.™°  gran  maestro  con  sua  religione  vorrá  restar  in  Malla 
poiche  vi  serán  posti  dodici  milia  fanti ,  doicento  cavalli  et 
mille  guaslatori  conforme  al  discorso  e  opinione  del'ingeniero 
Franc."  da  Gorlona,  a  cui  noi  ci  siamo  remessi ,  dicemo  a 
V.  Ecc'  che  sempre  che  detti  xij  mil  fanli,  cavalli  et  guas- 
tatori  se  ritroveran  dintro  quel  isola  con  tutla  quella  quan- 
tita  di  monizioni  et  vettuaglie  che  per  loro  trattinimento  sara 
necessaria  et  bastevole  a  poter  resistir'al  armata  et  guerra 
che  si  teme  li  debbi  sopravenire  et  ch'il  tutto  sia  ivi  ridotfo 
et  posto  per  lempo  o  avanli  si  possi  essere  vietato  et  inler- 
detto,  prometiera  esso  Mon/  III."''  gran  maestro  et  religio- 
ne (si  com'  hora  noi  prometteramo  a  sue  nome)  de  defcn- 


128 

derla  et  non  abandonarla  che  prima  non  habiamo  lutli  perso 
la  vita  con  essa.  Le  vituaglie  et  monizioni  che  bisogneranno 
per  detti  12  mil  fanti,  cavalli  et  guastatori  se  potra  calculare 
da  la  lisia  data  a  V.  Ecc.'^  per  li  3  mil  le  multiplicando  la  rata 
per  rata  fin  a  questo  numero  de  li  12  mille.  —  II  Siniscalco, 
F.  Pietro  de  Gyou. — F.  Pietro  Giustiniano,  cornt.®"^  diBolog- 
na. — F.  Fran.*^°  Burgués. 

Con  esta  se  halla  la  carta  original  citada  del  gran 
maestre,  con  un  retrato  bastante  bien  conservado  y  un  le- 
trero que  dice:  Joannes  (1)  de  VaLLEXE  M.  Hosp.  Hie- 
posol :  esto  es ;  Joannes  de  Vállete  ,  Magister  Hospitalis 

HiEROSOLYMITANI. 


Copia  de  Lo  que  refiere  el  conde  de  Vicary  en  respuesta  de 
lo  que  fué  á  decir  al  gran  maestre  y  su  Consejo. 

{Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  iiZOJ 

Illmo.  et  Excmo.  Signor  : 

Giunto  in  Malta,  secondo  l'ordine  di  V.  Ecc.^,  diedi  la 
sua  lettera  al  gran  maestro  et  al  Consiglio ,  e  perche  la  let- 
tera  di  V.  Ecc*  era  in  mia  credenza,  volse  il  gran  mastro 
che  in  presenzia  di  tutti  quelli  signori  del  Consiglio  dicessi 
in  nome  di  V.  Ecc*  quel  che  m'  era  stato  ordinato  per  lei  di 
diré.  lo  in  poche  parole  dissi  che  V.  Ecc*  poi  che  non  si 
aveva  posto  mano  nel  tempo  che  per  l'Ecc.^  V.  era  stato  ac- 
cordato  al  gran  mastro  nella  fabrica  della  nuova  citlá ,  il  che 
credeva  non  si  aver  fatto  per  alcun  legitimo  impedimento, 

(1)  Solo  se  leea  las  letras  que  van  marcadas  de  normanda. 


i29 

lasciando  di  frailar  del  passalo,  considerando  lo  slato  nel 
quale  oggi  si  Irovava  la  religione,  ci  era  parso  mandarmi 
in  Malta  per  fare  inlendere  al  gran  maestro  et  aquelli  signori 
del  Gonslglio  il  suo  parer,  il  quale  era  che  non  si  potendo 
abbracciare  tullo  il  monte,  sen  abbracciase  qualche  parle, 
con  lasciarsi  San  Teremo  alie  spalle  per  valersi  delle  cisterne, 
tanto  che  in  questo  luoco  acapessero  un  mille  o  mille  cinque 
cento  solJati,  perche  Sua  M.*^  faccese  grazia  alia  religio- 
ne d'aiutarla  della  gente  che  demandava.  II  Irovarsi  aversi 
fortifícalo  nel  monte,  giovava  anchora  alia  defesa  che  il  gran 
maestro  aveva  serillo  voler  fare  del  Borgo  e  di  San  Michele, 
el  che  credea  che  S.*  M.*^  non  averia  máncalo  di  soccorrere 
quella  religione ,  poi  che  cosi  aveva  fallo  l'anno  passalo  con 
cosi  grossa  spesa.  Di  piu  U  dissi  che  Y.  Ecc*  se  ben  l'anno 
passalo  era  slato  d'opinione  che  si  lenesse  la  cilla  di  Malla, 
che  quest'anno  era  di  contraria  opinione ,  perche  era  bisogno 
che  quelle  luoco  che  si  pretendea  defenderé  fosse  monito 
d'ogni  sorte  di  monizione,  di  manera  che  non  avesse  bisogno 
socorrersi  per  la  cilla ,  e  li  lurchi  avendo  visto  per  sperienza 
il  danno  che  l'anno  passato  riceverno  della  ciUá,  non  averia- 
no  lasciato  questa  volta  di  assaltarla  e  pigliarla ,  per  che  non 
si  poteva  defenderé ,  il  che  saria  stala  nostra  disrepulazione 
e  gli  nemici  averiano  preso  animo.  Quanto  al  Gozo  li  dissi 
che  Y.  Ecc.''  non  da  va  parere,  poi  che  non  aveva  visto  il 
luoco.  In  subslanza  questo  fii  quello  ch'io  dissi  al  maestro  di 
parle  di  V.  Ecc.'*,  certificándolo  che  di  canto  deirEcc.''  Y. 
non  si  mancheria  fare  ogni  servizio  a  quella  religione. 

II  maestro  incominció  a  diré  il  benefizio  ch'aveva  quella 
rehgione  ricevulo  della  molla  diligenzia  deU'Ecc*  Y.  l'che 
tullo  l'obligo  si  doveva  avere  della  salvazione  di  Malla  al  Re 
Calo.'^";  e  que  quanto  al  metiere  mano  alia  fabrica  della  nuo- 
va  cilla  nel  lempo  che  li  fu  accordato  per  TEcc.^  Y.  non  era 
Tomo  XXX.  9 


130 

stato  possibile  farlo,  perche  quella  religione  restó  ruínala 
d'oraini  et  d'ogni  altra  cosa,  e  che  con  tutto  che  con  galera 
a  posta  aveva  mandato  per  l'ingegnero  non  l'aveva  possuto 
avere  se  non  tardi,  perche  deU'Ecc."  V.  era  slato  anleposto 
l'ingegnero  del  duca  di  Firenza ,  e  quello  si  trovó  infermo, 
tal  che  fu  bisogno  servirsi  dell'ingegnero  di  Sua  Santilá ,  il 
quale  arrivó  tardi  in  Malta  e  in  tempo  ch'il  dar  principio  alia 
nuova  cilla  era  piu  tostó  monstrar  all  inimico  il  modo  di 
ibrtificarsi ,  che  di  ridurre  la  forteza  in  termine  di  potersi 
defenderé ,  e  di  piu  aveva  mandato  in  Sicilia  con  danarii  e 
con  lellera  di  V.  Ecc.^  e  non  aveva  possuto  avere  guastatori. 
A  questo  delli  guastatori  io  li  respuosi  che  V.  Ecc.^  sel  ave- 
ria fatli  andaré  sempre  ch'il  maestro  ci  avesse  falto  intende- 
re,  che  li  guastatori  non  volevano  andarci  di  buona  voglia ,  e 
che  cosí  in  questa  come  in  ogni  altra  cosa  ch'avesse  offerlo 
á  la  religione  non  averia  máncalo  un  punto.  II  maestro  si 
sforzo  con  mol  te  ragioni  monstrare  che  non  era  máncalo  da 
luí  di  non  meter  mano  alia  fabrica  della  nuova  cilla ,  ma 
n'era  stato  sola  causa  Timpossibilitá  caúsala  dalle  poche  forze 
della  religione.  Al  une  fu  concluso  che  per  lo  domane  andas- 
simo  al  monte  di  San  Teremo  per  vedere  come  si  aveva  di 
fare  quel  forte  che  a  V.  Ecc.'^  parea  si  dovesse  fare.  Et  lindo- 
mane  il  maestro,  l'ingegnero  el  io  con  allri  cavagleri  andam- 
mo  sopra  il  luoco  e  resolvió  l'ingegnero  ch'il  monte  non  si 
poteva  fortificare ,  se  non  si  pigliava  il  sino  in  sino  aU'alto 
della  montagna,  ch'era  la  meilá  del  disegno  grande  che 
V.  Ecc.*^  aveva  fallo  della  cilla  nuova ,  e  che  a  pigliar  tullo 
questo  sito  non  ci  essendo  in  ordini  li  guastatori  per  fare  le 
cisterne  el  il  fosso  della  fronte  et  alzarse  con  Irincee  che  non 
era  possibile  in  cosi  poco  tempo  d'inverno  che  ne  restaba 
farlo ,  che  quasi  prima  di  cominciarlo  saria  venuta  Tarmata 
lurchesca,  si  resolvevo  pura  che  si  forlificasse  S/°  Teremo, 


151 

ben  che  l'ingegnero  era  d'opinioQe  che  mal  si  polesse  forti- 
ficare senza  abbracciare  il  monte  secondo  il  parere  dell'E.  V.; 
di  piu  il  maestro  volse  che  si  reparasse  S.^  Angelo  e  si  fa- 
cesse  alcun  traverso ,  se  ben  l'ingegnero  lo  tien  per  spesa 
persa.  Con  questa  conelusione  mimbarcai  di  Malta  per  ve- 
nirmene ;  ma  sforzato  dal  mal  tempo ,  da  mezzo  canale  sene 
tórname  in  Malta  ove  sopraggiunse  la  galera  che  porto  il 
dispacio  della  corte ,  per  il  qual  s'intese  la  mercede  che  Sua 
Magestá  faceva  alia  religione ,  tanto  per  la  difesa  di  queste 
anno,  quanto  ancora  per  la  fabrica  della  nuova  cittá.  Questa 
nuova  se  ben  doveva  rallegrare  molto  a  tutti ,  parve  che  piü 
tostó  altristasse,  per  che  con  queslo  soccorso  pareva  che 
Sua  Magestá  constringesse  la  religione  restarse  alia  difesa  di 
Malta,  la  qual  (secondo  diccano)  non  era  fortifícala,  ne  mu- 
nita,  ne  a  tempo  di  potersi  muñir,  ne  fortificare.  S'intese  con 
questo  dispaccio  il  parer  d'Ascanio  della  Cornia ,  che  volea 
trincerarse  sopra  il  Borgo  in  S.'^  Margarita  e  guardar  quello 
luoco  con  seimilia  fanli,  al  meno  per  dui  mesi,  poi  che  la  re- 
tirata del  Borgo  era  sicura  e  si  potevano  serviré  dell'acqua 
del  Borgo  e  di  S.'°  Michele.  Questa  opinione  il  maestro,  l'in- 
gegnero e  tutti  l'altri  la  tennero  per  vana  e  che  a  nullo  modo 
si  dovesse  fare.  Scrivevano  anchora  di  corte  come  il  signor 
duca  d'Alba  era  di  parere  che  si  forlificassero  sopra  il  monte 
della  nuova  cittá  e  non  faccessero  baluarti  reali,  ma  sola- 
mente una  foríice,  il  quale  parer  se  ben  si  teneva  per  manco 
male  fu  stimato  per  poco  sicuro ,  e  perche  questo  dispaccio 
venne  accompagnato  d  una  lettera  di  V.  Ecc.%  volendo  io 
anchora  la  resposta  di  questa  lettera  il  maestro  mi  diede  la 
respuesta,  e  secondo  mi  disse  non  volse  responderé  á  V.  E.' 
sopra  questo  soccorso  del  Re,  perche  V.  Ecc.^  ci  escrivea  re- 
mettendosi  alia  carta  del  prior  D.  Antonio  di  Toledo,  et  il  prior 
non  scriveva  cosa  alcuna,  ma  solamente  cene  scriveva  il 


132 

Gomendalorc  Boninsegni,  dicentlo  che  quando  verria  il  dis- 
paccio  lili  scriveria  secondo  il  lempo  a  V.  Ecc.'^  della  resolii- 
zione  chela  religione  pigliasse,  dicendomi  che  lui  non  man- 
cheria  di  fare  il  suo  debito  di  defenderé  la  sua  religione  c 
che  per  imprudenza  si  forzeria  di  non  perdita. 

Questo  c  quello  ch'io  ho  passato  in  xMalta.  E  perche  V.  E. 
mi  ci  mando  per  pigliar  resoluzione,  ci  dico  che  il  maestro 
poi  che  il  tempo  e  tanto  inanzi  venendo  l'armata  turchesca 
gaglarda  ( come  dicono  )  esso  e  la  religione  non  staranno  in 
Malta,  ma  lasceran  guarniti  li  castelli  di  S.'°  Teremo  e  di 
Santo  Angelo  con  mille  cinquecento  soldati  che  gia  ha  fatlo 
et  espedite  li  capilani  e  si  partirá  dell'isola  con  intenzione 
di  slare  qucsla  slate  dove  Sua  Magestá  ordinera ,  e  da  poi  1 ' 
invernó  sene  tornera  in  Malta  per  fortificarse,  et  all'ora  si 
servirá  delli  50  mil  scuti  che  Sua  Magesta  aveva  fatto  grazia 
di  daré  alia  religione,  e  molti  cavagleri  diceano  che  la  paga 
delli  seimilia  soldati  e  li  10  mil  scuti  che  dovea  daré  di  pol- 
vere  et  altre  munizioni  il  vice-re  di  Napoli  e  li  10  mil  scuti 
che  dovea  daré  V.  Ecc*  di  veltoaglia  era  meglio  con  li  30 
mil  scuti  spendersi  in  la  fabrica  come  resoluti  che  per  questo 
anno  (venendo  l'armata)  non  poteva  la  religione  stare  in 
Malta,  et  a  mió  giudicio  et  e  cosi  la  verilá  non  fu  mai  reso- 
luzione  di  difendersi  nel  Borgo  per  molti  soldati  che  si  li  des- 
sero,  perche  tutli  con  l'ingegnero  tengano  che  sia  meglio  dc- 
fendersi  in  campagna  che  dentro  il  Borgo ,  e  gia  il  maestro  il 
confessa ;  ma  dice  che  avendo  dodici  milia  soldati  morirá  con 
loro  in  il  Borgo,  e  per  diría  come  l'intendo  tengano  che  la  re- 
soluzione  di  questo  soccorso  vena  cosi  tarda,  che  con  buona 
faccia  si  potra  diré  che  non  e  piu  a  tempo  si  che  venendo 
l'armata  turchesca  si  piglerá  la  resoluzione  chho  dctto,  e  non 
venendo  (che  v'hanno  gran  speranza)  il  maestro  no  avcr.i 
lasciato  Malla ,  per  questo  tarda  a  diré  il  gran  maestro  Tul- 


435 

lima  sua  delerminazione ,  e  con  'manlencrc  quelle  fortczze 
pare  che  la  religione  in  nessun  lempo  lasció  il  possesso  di 
quella  isola ,  della  quale  sonó  molto  gelosi ,  tanto  piu  che  io 
Malta  v'era  openione  che  V.  E.*  abandonándola  la  religione 
pensava  fortificarla  per  Sua  Magestá,  e  qu'io  giunsi  in  Malta 
per  la  maggior  parte  si  credeva  ch'io  fossi  ándalo  con  questo 
disegno.  E  questo  ch'io  ho  detto  airEcc.'*  Y.  non  lo  dico  per- 
che me  rinmagini ,  ma  perche  e  cosi  veramente ,  e  quelli 
signori  del  Gonsiglio  volevano  trattare  d'hora  raan:lare  questa 
resoluzione  a  V.  Ecc.*,  ma  il  mastro  no  ha  volulo  che  si 
tratti  di  questo  con  diré  che  non  e  lempo  anchora. 


Carla  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  3/.,  fecha  en 
Calania  á  16  de  febrero  de  1566. 

Le  pregunta  qué  ha  de  hacer  si  el  maestre  y  la  religión  de  San 
Juan  dejan  á  Malta. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  1450.^ 

S.  C.  R.  M. 

Dos  cartas  de  V.  M.  de  18  del  pasado  rescibí  á  los  12 
del  presente  con  las  órdenes  y  lo  demás  que  V.  M.  ha  man- 
dado proveer  para  la  Goleta  y  Malta,  y  estando  escribiendo 
esta  rescebí  también  la  de  los  23  de  enero  con  los  duplica- 
dos de  los  18,  y  por  haber  respondido  á  los  dos  del  presente 
á  la  mayor  parle  de  lo  que  contienen ,  terne  poco  que  decir 
en  satisfacción  dellas. 

En  resabiéndolas  envié  al  maestre  un  gentil  hombre  con 
el  despacho  de  V.  M.,  y  le  screbi  lo  que  V.  M.  verá  por  la 


134 

copia  que  va  con  esla ;  y  aunque  no  hay  en  mi  poder  un 
real ,  me  paresció  decirle  que  tenia  el  dinero  prompto ,  ansí 
para  las  victuallas  como  para  la  fortificación ,  porque  me  han 
avisado  que  tenia  esperanza  en  la  tardanza  de  las  provisio- 
nes, del  dinero  y  victuallas  para  disculpa  de  no  quedar  este 
verano  en  la  isla,  diciendo  que  estas  provisiones  eran  ya 
tardías;  y  si  se  determinase  á  quedar  y  á  querello  todo  junto, 
yo  me  sabré  dar  maña  con  mi  hacienda  y  con  la  de  mis  ami- 
gos para  proveerlo.  Y  si  por  caso  el  maestre  siguiese  la  de- 
terminación ,  que  por  la  relación  del  conde  de  Vieary  V.  M. 
habrá  podido  ver  y  verá ,  pues  con  esta  va  el  duplicado ,  y 
quisiese  salirse  de  la  isla,  mándeme  V.  M.  luego  despachar 
un  correo  avisándome  si  quiere  que  aquello  quede  como  el 
maestre  lo  dejará  con  la  guardia  de  San  Ángel  y  San  Tol- 
mo,  ó  si  manda  V.  M.  que  Ascanio  de  la  Corna  entre  y  que- 
de con  la  provisión  que  V.  M.  ha  mandado  hacer  para  la 
defensa  de  aquella  isla.  Advertiendo  á  V.  M.,  como  lo  debe 
ya  saber,  que  el  papa  ha  dado  los  tres  mil  hombres,  y  ha 
nombrado  á  Pompeo  Golona  por  cabo  dellos ;  y  si  la  persona 
del  maestre  se  sale ,  está  claro  la  división  entre  estas  dos  ca- 
bezas, y  desto  V.  M.  esté  seguro  que  será  ansí,  porque  en 
este  particular  sé  lo  que  digo. 

También  me  ha  de  mandar  V.  M.  si  en  caso  que  viendo 
Su  Santidad  la  salida  del  maestre  revocase  la  venida  de  su 
gente ,  si  ha  de  quedar  el  dicho  Ascanio  con  solos  los  tres 
mil  que  V.  M.  ha  proveído;  y  si  se  hubieren  de  hacer  los 
tres  mil  italianos  en  lugar  de  estos  que  el  papa  negase,  con 
qué  dineros  se  han  de  levantar  y  pagar.  Advirtiendo  á  V.  M. 
que  me  paresce  que  no  habiendo  puesto  el  maestre  mano  en 
la  montaña  de  San  Telmo  que  no  hay  ya  tiempo  para  poner- 
la en  ninguna  manera  de  defensa;  ni  tampoco  le  veo  para 
hacer  las  trincheas  á  Santa  Margarita  como  Ascanio  decia  y 


135 

V.  M.  apunta;  pero  cuando  bien  esto  se  pudiese  hacer,  no 
pudiéndose  defender  luengamente  en  ellas,  como  se  dice  en 
la  misma  memoria  que  se  me  envía ,  no  teniendo  hecho  nada 
en  el  monte,  no  sé  á  donde  se  puedan  retirar;  y  siempre  he 
pensado  que  habia  de  parar  en  esto,  como  mas  largamente 
lo  he  escrito  á  V.  M.  Espero  lo  que  el  maestre  rae  respon- 
derá. Y  el  enviar  allí  galeras  para  ayudar  con  los  forzados  á 
la  fortificación  habia  de  haber  sido  mucho  mas  temprano ,  y 
habiendo  ellos  querido  comenzar  la  obra ,  ni  se  podría  hacer 
sin  que  hiciesen  la  falta  que  V.  M.  apunta,  certificando  á 
Y.  M.  que  tengo  por  cosa  imposible  poder  hacer  victualla 
para  dos  ejércitos  y  una  armada  de  mar  en  tan  poco  tiem- 
po. Y  cuanto  á  lo  del  pan  que  es  lo  que  mas  importa,  V.  M. 
verá  lo  que  me  escribe  el  virey  de  Ñapóles  por  esa  carta ,  y 
lo  que  yo  le  respondo.  Y  los  diez  y  seis  mil  quintales  que  aquí 
se  ha  dado  principio  para  hacer  son  mas  de  40  mil  quinta- 
les de  peso  de  Castilla,  y  aunque  se  habia  comenzado  algu- 
nos días  antes  que  el  duque  de  Alba  me  escribiese,  temo  que 
no  se  ha  de  poder  hacer  esta  suma ,  porque  como  llega  este 
tiempo,  van  por  ordinario  faltando  las  aguas  á  los  molinos. 
Si  se  hubiese  de  proveer  de  solo  trigo,  esto  se  haría  con  mas 
facilidad,  aunque  hay  menos  del  que  se  pensaba,  y  ha  tres 
días  que  tengo  la  claridad  de  lo  que  hay  en  los  cargadores 
del  reino,  y  hallólo  bien  apretado.  Con  todo  esto  porque  por 
todas  partes  se  hagan  diligencias  en  este  particular,  he  es- 
crito al  virey  de  Cerdeña  que  allí  haga  fabricar  todo  el  mas 
que  se  pudiere  hasta  el  día  que  fueren  las  galeras  á  tomar 
la  gente  ,  y  le  he  dado  orden  que  se  saque  á  pagar  al  em- 
bajador de  Genova  lo  que  montare  aquello ,  y  las  carnes  sa- 
ladas que  allí  se  han  de  lomar,  y  al  dicho  embajador  que  lo 
cumpla  sacándoselo  á  pagar. 

También  he  escrito  olra  carta  á  la  señoría  de  Genova, 


ióCy 

que  me  acomoden  de  tres  mil  salmas  de  trigo  ó  de  la  mayo^r 
cuantidad  que  pudieren,  de  las  cuales  se  harán  seis  mil  quin- 
tales de  bizcocho  deste  peso,  que  serán  casi  doce  mil  del  de 
España ,  prometiéndoles  de  por  todo  marzo  ponerles  allí  otro 
tanto  trigo  en  sus  magacenes ,  el  cual  he  mandado  que  se 
compre  y  haré  que  se  embarque ,  porque  aunque  esta  provi- 
sión no  haya  efecto,  no  se  perderá  nada  en  tenelle  allá.  Este 
bizcocho  servirá  la  poca  parte  que  fuere  menester  para  la 
comida  de  los  soldados,  y  lo  demás  para  la  provisión  de  la 
Goleta,  y  con  lo  que  escribo  al  virey  de  Ñapóles  de  acá  yo 
no  sabría  hacer  otra  provisión. 

Las  demás  cosas  se  irán  proveyendo  lo  mejor  que  se  pu- 
diere conforme  á  la  brevedad  del  tiempo.  Y  pues  V.  M.  man- 
da resolutamente  que  vayan  los  42  mil  hombres  á  la  Goleta, 
no  tengo  mas  que  replicar,  sino  que  lo  ejecutaré  con  la  mas 
brevedad  y  diligencia  que  el  tiempo  me  lo  concediere ,  sin 
esperar  otra  respuesta  ni  orden  de  V.  M. 

Queso,  legumbres,  pescado  y  arroz ,  y  otras  provisiones 
para  la  embarcación  de  la  gente ,  yo  las  llevaré  de  acá  en 
las  galeras,  porque  si  se  hubiesen  de  comprar  en  Genova 
seria  mucho  mas  caro,  y  el  dinero  que  queda  para  victua- 
llas  en  poder  del  embajador,  que  sacadas  todas  las  partidas 
que  ha  de  dar  á  Nicolás  Cid  y  la  partida  de  los  cincuenta 
mil  para  Malta,  y  la  de  los  cincuenta  y  seis  mil  para  las  vic- 
tuallas  de  la  Goleta ,  y  la  de  los  cincuenta  mil  últimos  que 
apunta  V.  M.,  que  si  paresciere  se  reserve  para  e)  sueldo  de 
advenir,  hallo  que  quedan  treinta  y  un  mil  escudos  para  las 
dichas  victuallas  de  la  embarcación  de  la  gente ,  las  cuales 
tomaré  para  que  dellos  se  paguen  las  victuallas  que  de  acá 
se  han  de  llevar.  Creo  que  se  hará  con  mucha  mas  ventaja 
desta  manera ,  y  si  algo  sohi'are  de  todo  este  dinero  se  haní 
dello  lo  que  mas  convenga  en  beneficio  de  lo  que  está  oi"dc- 


io7 

nado  y  mandado  sin  gastarse  en  otra  cosa,  y  para  q.ic  no  se 
mezcle  con  otros  gastos  he  diputado  un  tesoro  particular  que 
coa  intervento  de  Pedro  Agustín ,  maestro  racional  de  este 
reino  y  el  conservador  del  atiendan  á  tener  cuenta  par- 
ticular de  todo  lo  que  gastare.  El  vino  tomaré  de  camino  ea 
Ñapóles,  que  será  mas  barato  que  aquí. 

El  Fratin  no  es  llegado,  aunque  ha  días  que  tengo  aviso 
estaba  en  Genova;  pero  lo  que  yo  había  de  enviar  de  aquí 
para  la  Goleta  fuera  los  gastadores  es  ya  partido ,  excepto  la 
cal  que  se  va  enviando  como  se  va  acabando. 

Y  he  visto  el  designo  del  fuerte  que  los  12  mil  soldados 
han  de  hacer ,  y  leído  lo  que  sobre  ello  se  escribe ,  y  con  es- 
tar muy  bien  apuntado  y  dicho,  soy  todavía  de  opinión  que 
aquel  sitio  por  las  causas  dichas  en  mis  despachos,  lo  tengo 
por  muy  peligroso. 

Mándame  V.  M.  que  diga  la  traza  que  se  ha  de  tomar 
en  la  manera  del  llevar  la  gente  á  estas  dos  plazas.  Ya  ten- 
go dicho  que,  ansí  por  excusar  el  gasto,  como  para  ganar 
tiempo,  es  bien  que  lo  hagan  las  galeras,  y  que  con  naves 
no  vaya  sino  lo  que  no  se  pudiere  excusar  que  no  será  poco. 
Y  también  tengo  escrito  á  V.  M.  que  si  pudiese  meterse  la 
gente  de  la  Goleta  por  hebrero ,  que  no  se  había  de  esperar 
á  marzo,  porque  tengan  tiempo  de  repararse,  y  ansí  lo  torno 
á  confirmar ,  y  por  esta  causa  digo  que  en  llevarla  me  daré 
toda  la  priesa  posible,  y  no  digo  el  modo  ni  la  manera ,  por- 
que de  una  hora  á  otra  ocurren  cosas  que  me  pueden  hacer 
mudar.  Todo  lo  que  escribo,  como  lo  fuere  ejecutando,  iré 
dando  aviso  á  V.  M. 

A  D.  Gabriel  escribo  que  á  los  15  de  marzo  tenga  los  es- 
pañoles en  la  Especie.  También  le  digo  que  solicite  los  cua- 
tro mil  italianos  que  se  han  de  hacer,  ó  por  Chapín  Vitelli, 
o  por  Cesaro  de  Nápolcs,  para  que  estén  todos  juntos  á  un 


158 

tiempo.  Si  me  paresciere  pasarme  desle  viaje  por  Cerdeña, 
tomaré  también  aquella  gente  para  que  se  metan  de  una  vez 
la  mas  que  se  pudiere  en  la  dicha  Goleta,  y  esto  haré  según 
el  tiempo  y  las  ocasiones  me  lo  permitieren.  En  esta  barca- 
da procuraré  de  llevar  las  mas  vietuallas  que  pudiere.  Daré 
priesa  en  este  medio  que  se  meta  en  las  naves  lo  que  hubie- 
ren de  llevar  si  pudiere  estar  á  punto ,  y  consideraré  si  con- 
verná  hacer  primero  con  las  galeras  que  aquí  tengo  el  ca- 
mino de  la  Goleta,  llevando  con  ellas  algún  golpe  de  victua- 
11a.  Pero  ya  digo  que  el  tiempo  ha  de  ser  maestro  de  todo, 
al  cual  en  este  particular  me  remito. 

Escribo  al  virey  de  Ñapóles  que  haga  partir  luego  las 
galeras  de  D.  Sancho,  y  las  de  Gabrio  Cervellon  y  Mari,  y 
que  traigan  en  ellas  toda  la  infantería  española  que  pudieren 
embarcar  de  la  que  está  alojada  en  Ñapóles  y  alrededor  del, 
y  que  la  demás  que  estuviere  hacia  estas  marinas  la  haga 
venir  por  tierra  á  Ríjoles,  porque  conveniendo  hacer  el  ca- 
mino de  la  Goleta  pueda  llevarla  y  dejarla  allí,  para  que  ayu- 
de al  principio  de  la  obra.  Y  cuanto  al  llevarla  toda  junta, 
como  se  dice  en  la  memoria  que  particularmente  se  me  ha 
enviado ,  demás  de  ser  incómodo  para  las  pocas  galeras  que 
hay,  no  cumple  que  toda  la  gente  tarde  tanto  á  entrar  en 
parle  do  tiene  tanto  que  fortificar,  ni  en  este  medio  se  pueden 
meter  vietuallas,  porque  con  atender  primero  á  lo  de  la  gen- 
te, se  da  tiempo  á  que  se  vayan  haciendo;  basta  que  se  me- 
terán tantas  que  esta  gente  primera  terna  de  comer  hasta  la 
segunda  ó  tercera  barcada ,  y  demás  de  la  labor  que  han  de 
hacer ,  para  lo  cual  es  necesaria  la  anticipación  que  escribo, 
si  quisiese  esperar  á  llevarlo  todo  junto,  no  podría  ser  sino 
con  muy  grueso  golpe  de  naves  como  apunto;  y  habiéndo- 
las de  esperar  en  la  navegación ,  si  con  la  tardanza  me  so- 
breviniese la  armada,  las  naves  serian  perdidas,  y  si  se  di- 


139 

jese  que  fuesen  las  naves  todas  juntas  agora,  ya  está  dicho 
que  la  victualla  no  está  hecha,  y  demás  desto  haciéndose  en 
tantas  y  en  tan  diferentes  partes  y  tan  lejos  unas  de  otras, 
no  pueden  juntarse  las  naves  para  su  seguridad,  ni  hay  tan- 
tas galeras  según  lo  que  hay  que  hacer  que  se  puedan  des- 
membrar para  asegurarlas  el  paso  yendo  divididas ,  ansí  que 
la  necesidad  me  fuerza  á  salir  de  la  orden  que  se  me  da ,  y 
como  yo  vuelva ,  si  fuere  posible,  llevaré  también  los  tudes- 
cos siendo  venidos  veré  de  hacerlo ,  y  sino  dende  la  Goleta; 
enviaré  una  parte  de  las  galeras  por  ellos ,  y  yo  con  las  de- 
más tornaré  aquí  y  en  Ñapóles  á  cargar  la  mayor  parte  que 
pudiere  de  victuallas  para  la  dicha  gente ,  y  en  estas  idas  y 
venidas  se  asegurará  el  camino  á  las  naves  que  fueren  y  vi- 
nieren con  las  demás  provisiones.  Hasta  agora  me  paresce 
necesario  ir  yo  con  las  galeras  para  que  se  haga  en  los  via- 
jes y  en  la  embarcación  la  diligencia  que  conviene  para  que 
no  se  pierda  mas  tiempo,  pues  queda  tan  poco.  Si  otra  cosa 
me  paresciere  adelante,  haré  lo  que  viere  que  cumple  al  ser- 
vicio de  V.  M. 

Ha  sido  muy  necesaria  la  diligencia  que  V.  M.  ha  man- 
dado usar  en  escribir  al  duque  de  Florencia  y  á  la  república 
de  Luca  sobre  lo  de  la  pólvora ,  porque  en  esto  no  veo  yo 
ningún  remedio ,  ni  que  se  pueda  hacer  mas  diligencia  de  la 
que  está  hecha,  como  lo  tengo  escrito  á  V.  M. 

Las  dos  mil  botas  de  vino  que  V.  M.  dice  que  se  envíen 
á  Malta ,  tractarlo  con  mercaderes  no  hay  que  pensar ,  por- 
que no  son  gentes  que  se  quieran  meter  entre  confusión  de 
soldados,  ni  á  donde  haya  menor  seguridad  que  en  Toledo; 
ni  los  que  tractan  en  estas  cosas  son  gente  de  bolsa  tan  gruesa: 
sola  esta  partida,  si  se  compra,  costará  veinte  y  cuatro  mil 
ducados. 

Cuando  bien  sean  diez  mU  españoles  los  que  V.  M.  dice 


140 

que  se  han  de  juntar,  sacando  cinco  mil  para  la  Goleta,  mil 
para  Malta;  cuando  los  cuatro  mil  que  quedan  hubiesen  de 
servir  para  la  armada,  aunque  conveniese  dejar  este  reino 
solo ,  no  es  provisión  bastante  para  ella ,  porque  á  lo  menos 
se  juntarán  noventa  galeras ,  las  cuales  envío  á  V.  M.  por 
una  memoria,  en  especial  si  hubiesen  de  ir  á  dañar  lo  de  le- 
vante, estando  por  acá  ocupada  la  armada.  V.  M.  vea  lo 
que  fuere  servido  proveer  en  esto ,  y  si  se  hubiere  de  levan- 
lar  infantería  italiana  de  qué  dinero  se  ha  de  pagar. 

El  servicio  extraordinario  que  este  reino  ha  hecho  á  V.  M. 
mandará  ver  por  lo  que  le  escribo  por  via  de  Vargas  en  res- 
puesta de  lo  que  acerca  deste  particular  me  mandó. 

La  gente  de  buena  boya  para  el  remo  que  V.  M.  manda 
levantar  en  Genova  y  Ñapóles ,  á  todas  partes  escribo  que  lo 
suspendan  porque  esta  fuera  muy  buena  provisión  si  tuvié- 
ramos hechos  todos  los  cuarenta  buques  que  se  hacen  en 
Barcelona  y  los  demás  que  se  hablan  de  hacer,  porque 
juntándolos  con  los  que  hay  del  año  pasado  pudiera  ser  que 
se  pudieran  defender  todos  los  presidios  con  sola  la  armada 
de  mar ;  pero  para  quince  ó  veinte  galeras  mas ,  no  bastando 
estas  á  hacernos  iguales  á  la  armada  del  turco,  no  hay  para 
qué  hacer  este  gasto ,  antes  dañarla ,  porque  siendo  galeras 
nuevas  no  podríamos  traer  con  ellas  la  seguridad  que  se 
traerá  con  las  que  están  armadas.  La  orden  que  se  ha  dado 
á  D.  Alvaro  para  que  las  haga,  es  bien  para  que  se  refuer- 
cen las  galeras  armadas.  Y  cuanto  á  los  buques  que  se  hacen 
en  Cataluña  se  irá  dando  aviso  á  V.  M.  de  lo  que  será  me- 
nester proveer  acá  y  allá  para  los  adrezos  dellos  y  estén  á 
punto  el  marzo  de  cincuenta  y  siete. 

La  madera  que  se  envió  á  pedir  al  virey  de  Ñapóles  para 
los  quince  buques  que  aquí  se  habían  de  hacer,  al  virey  no 
le  parescc  darla  con  la  franqueza  que  V.  M.  la  corta  y  toma 


141 

para  las  galeras  que  allí  se  hacen,  diciendo  que  para  olm 
reino  no  se  puede  conceder  lo  que  se  concede  á  las  que  allí 
se  fabrican  por  V.  M. ;  y  porque  habiéndolo  de  pagar  saldrán 
las  galeras  carísimas  como  han  salido  las  que  aquí  se  lian 
hecho ,  demás  de  ser  ruin  madera  y  durar  por  esto  muy  poco 
tiempo,  será  bien  que  estas  quince  galeras  se  hagan  alli, 
porque  saldrán  la  cuarta  parte  mas  baratas ,  y  que  también 
estén  hechas  para  el  marzo  que  digo ,  y  en  este  medio  se  va 
labrando  en  fuerza  en  el  arzanal  de  Mesina,  y  se  irá  cubrien- 
do para  que  puedan  estar  bien  conservadas  y  á  mano  para 
servir. 

El  no  haber  enviado  D.  Juan  de  Villarroel  la  relación 
particular  que  V.  M.  pide ,  debe  ser  por  no  haber  podido;  y 
cuando  me  mostró  lo  que  enviaba ,  le  dije  que  fallaba  la  sus- 
tancia, que  es  lo  que  agora  V.  M.  demanda. 

La  cuenta  que  V.  M.  dice  que  terna  con  Juan  Andrea, 
la  merescen  bien  sus  servicios;  y  supUco  á  V.  M.  lo  mande 
luego  despachar. 

Yo  no  puedo  servir  á  V.  M.  como  debo  y  deseo  si  no  es 
con  ayuda  de  hombres  que  sepan  servir  y  hacer  lo  que  se 
les  manda ,  y  de  otra  manera  habrá  muchas  faltas  en  todo, 
y  digo  que  en  este  arte  que  tracto  de  la  mar  hay  muy  pocos 
que  lo  sepan  hacer ,  y  si  de  los  que  hay  no  se  echa  mano,  ni 
V.  M.  será  servido,  ni  yo  saldré  con  lo  que  pretendo,  que 
es  hacerlo  bien.  Esto  digo  por  lo  que  tengo  escripto  de  la 
persona  de  Pedro  Francisco  Doria ,  porque  trayéndola  cabe 
mí  en  el  servicio  de  V.  M.  es  de  mucho  mas  útil  y  prove- 
choso el  servicio  que  hará ,  que  dañoso  el  salario  y  sueldo 
que  se  le  dará,  y  ansí  suplico  á  V.  M.  mande  proveer  esto 
de  manera  que  él  pueda  venir  á  servir;  y  cuando  todavía  no 
paresciese  á  V.  M.  darle  los  ciento  y  cincuenta  ducados  al 
mes,  sabiendo  cuan  necesario  es  para  su  servicio,  haria  mal 


i42 

si  por  ningún  interese  lo  dejase  ;  y  ansí  suplico  á  V.  M.  se 
lo  mande  dar  y  disminuir  de  mi  salario ,  lo  cual  habria  ya 
hecho  si  él  fuese  hombre  que  quisiese  tomar  entretenimiento 
de  mí.  Y  el  mandar  á  Aparicio  de  Ugarte  que  venga  á  ser- 
vir, ha  sido  muy  bien,  y  llegará  á  tiempo  que  tendrá  bien 
que  hacer. 

En  lo  que  toca  á  las  dos  galeras  de  Cabrio  Cervellon,  yo 
he  observado  lo  que  V.  M.  me  mandó ,  que  fué  que  se  le 
diese  el  sueldo  por  el  tiempo  que  durase  el  último  asiento  de 
Juan  Andrea ,  y  visto  agora  que  Vendinelli  arma  las  suyas 
seria  de  parescer  que  pues  él  las  quiere  resolutamente  dar  á 
V.  M. ,  como  me  lo  escribe  el  comendador  mayor  de  Castilla, 
que  se  tomasen  y  que  sirviesen  con  las  que  yo  tengo  á 
cuenta  del  subsidio,  las  cuales  se  pagarían  con  las  provisio- 
nes que  V.  M.  envía  para  las  demás  que  acá  están,  ypodríase 
pagar  del  dinero  diputado  para  comprar  esclavos ,  pues  en 
Sevilla  no  se  hallan ,  y  creo  que  sumarian  poco,  porque  todos 
los  mas  que  tiene  son  forzados  y  acá  se  podrían  tasar. 

El  príncipe  de  Florencia  me  escribe  la  que  va  con  esta, 
por  la  cual  mandará  ver  V.  M.  lo  que  dice  acerca  de  sus 
pagas ,  y  siendo  tanto  lo  que  ha  de  haber  me  paresce  que 
tiene  razón  en  desear  ser  pagado,  y  ansí  lo  suplico  á  V.  M., 
porque  de  otra  manera,  ni  podrán  servir  sus  galeras,  ni 
hombre  mandarlas,  especialmente  reposando  tan  poco  como 
lo  hacen  en  estos  tiempos.  Cuarde  Nuestro  Señor  la  vida  de 
V.  M.  como  sus  criados  deseamos  y  la  cristiandad  ha  me- 
nester. De  Catania  á  16  de  hebrero  1566. — Criado  y  vasa- 
llo de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. — Don  García 
de  Toledo. 

AS.  M.  por  via  de  Eraso. 

Sobre. — A  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro  seííor.  —  En 
manos  del  secretario  Francisco  de  Eraso. 


143 


Carla  original  de  D.  García  de  Toledo  al  secretario 
Francisco  de  Eraso.  De  Catania  en  Sicilia  á  16  de  fe' 
hrcro  de  1566. 

Dice  que  se  da  toda  la  prisa  posible  en  lo  que  se  ha  de  hacer — 
Temores  de  que  el  gran  maestre  abandone  á  Malta  si  vuelve  á  ella 
la  armada  turca — Se  queja  de  la  inexperiencia  de  los  oficiales  de 
hacienda — Pide  al  duque  de  Alcalá  la  infantería  española — Falla 
de  dinero — Casas  de  madera  para  alojar  la  tropa  en  la  Goleta. 

(Archivo  general  de  Simancas Negociado  de  Estado,  legajo 

núm.  1150.^ 

Ilustre  Señor  : 


Ya  había  rescebido  el  despacho  de  S.  M.  de  los  18  de 
enero  cuando  llegó  el  duplicado,  y  con  la  carta  que  escribí 
á  S.  M.  en  respuesta  de  lo  que  el  duque  me  avisó,  y  con  la 
que  será  con  esta,  he  respondido  á  todo  lo  que  se  me  ha  man- 
dado ,  y  dóimc  toda  la  priesa  posible  en  todo  lo  que  tengo  de 
hacer.  Pero  si  esta  deligencia  se  aprieta  á  cosas  muy  dificul- 
tosas, aunque  la  hubiese,  dará  consigo  en  tierra.  Al  maes- 
tre envié  luego  su  despacho,  y  estoy  esperando  la  respuesta; 
y  á  lo  que  yo  sospecho  y  dice  el  conde  de  Vicary,  no  que- 
dará él  en  Malta  este  verano  si  el  armada  viene. 

La  provisión  de  la  Goleta  plega  á  Dios  que  nos  salga 
bien,  porque  con  todo  que  he  visto  cuan  bien  se  justifica  por 
escrito,  no  sé  si  con  obras  se  podrá  hacer  con  tanta  facilidad 
como  se  apunta  y  discurre  de  palabras,  tanto  mas  que  aun- 
que no  hubiese  otro  inconveniente  sino  el  poco  tiempo  que 
les  quedará  después  que  allí  entren ,  es  bien  bastante  para 
ver  cuan  mal  se  podrá  acabar  tan  grande  obra ,  y  sí  á  mi 


144 

determinación  estuviera,  confieso  que  no  lo  osara  empren- 
der: plega  á  Dios  que  yo  me  engañe.  Si  por  caso  S.  M.  hu- 
biese de  mudar  de  parescer  enviéseme  luego  á  mandar,  por- 
que yo  pueda  tornar  á  sacar  la  gente  que  hubiese  metido,  y 
los  correos  que  de  aquí  adelante  se  me  enviaren,  uno  (i) 
para  pasar  adelante  con  él,  y  otro  para  dejármele  en  Geno- 
va. Si  este  buen  hombre  del  maestre  hubiera  comenzado  la 
fábrica  con  tiempo,  asegurándose  aquello,  creo  que  se  ase- 
guraba también  la  Goleta;  pero  al  fin,  señor,  no  nos  sacó 
Dios  el  año  pasado  de  tanto  trabajo  para  meternos  este  en 
otros  mayores,  y  ansí  espero  en  él  que  ha  de  acabar  la  mer- 
ced que  nos  ha  comenzado  á  hacer  en  especial  pues  allá  se 
le  reconosce  con  obras  y  con  palabras ,  y  tengo  por  cierto 
que  las  oraciones  y  limosnas  que  S.  M.  ha  hecho,  han  sido 
gran  parte  de  lo  sucedido.  Envío  á  v.  m.  la  copia  de  lo  que 
escribo  á  S.  M.  por  via  de  Vargas  acerca  del  donativo  para 
que  quede  informado  de  lo  que  en  esto  ha  habido,  y  el  poco 
tiempo  que  hay  para  lo  mucho  que  queda  que  hacer ,  y  la  in- 
quietud en  que  por  esta  causa  quedo,  basta  á  desculpar  este 
despacho  si  hubiese  en  él  alguna  cosa  mal  entendida. 

El  dilatarse  el  enviar  de  la  cuenta  del  año  pasado  y  del 
gasto  de  las  galeras,  crea  S.  M.  que  no  es  á  mi  culpa,  por- 
que jamás  como  ni  ceno  con  otro  cantar.  Háme  dado  S.  M. 
oficiales  nuevos,  suplicándole  yo  que  me  diese  los  que  con 
abrir  y  cerrar  los  ojos  pudieran  descansarme  con  el  mayor 
fastidio  de  la  tierra.  Don  Juan  es  el  mejor  hombre  que  jamás 
se  vio ,  y  de  mejor  celo  é  intención ;  pero  en  estos  casos  es 
tan  atado  y  embarazado  y  tan  confuso,  que  jamás  puedo  sa- 
car claridad  de  cosa  que  deseo.  Anda  á  malas  con  Andrés  de 

(1)  Añadió  el  Rey  de  su  letra  al  margen  y  formando  renglón  con 
unOf  lo  siguiente:  Irayan  dos  dtspachos. 


145 

Álava ,  y  piensa  que  él  solo  lo  puede  hacer  todo ,  y  no  hace 
nada,  ni  lo  entiende,  y  cuando  hombre  piensa  que  va  ade- 
lante lo  halla  atrás.  Y  estos  no  son  gastos  ni  cosas  de  cuali- 
dad para  crear  hombres  que  no  sepan  ya  lo  que  en  esto  han 
de  hacer:  y  juro  á  v.  m.  que  he  tenido  y  tengo  mayor  tra- 
bajo con  los  oficiales  que  con  toda  el  armada ,  habiendo  de 
ser  los  que  me  habian  de  descansar.  Y  esto  sea  para  v.  m. 
solo,  si  ya  no  lo  quisiese  escribir  á  S.  M.,  que  es  bien  que 
sepa  lo  que  en  esto  hay.  A  mi  señora  Doña  Mariana  beso  las 
manos,  y  he  holgado  mucho  de  saber  que  está  buena. 

Lo  que  V.  m.  me  escribe  de  las  tres  personas  que  nom- 
bran á  S.  M.  para  la  Goleta,  he  visto  y  creo  que  no  dañaría 
hacerse  estas  cosas  con  parescer  del  que  gobierna,  ó  gober- 
nó, ó  gobernare  la  mar  por  evitar  con  ello  muchos  inconve- 
nientes. Haga  S.  M.  en  todo  lo  que  le  pareciere,  que  aque- 
llo será  mas  acertado.  En  Gatania  á  16  de  hebrero  1566. — 
— Servidor  de  v.  m. — Don  García  de  Toledo. 

De  mano  de  D.  Garda  de  Toledo. 

Al  conde  de  Aitona  tengo  por  muy  amigo.  Suplico  á  v.  m. 
que  en  todo  conozca  él  que  por  mis  respetos  le  hace  v.  m. 
merced,  que  yo  la  terne  por  muy  grande. 

Sobre  de  la  carta. — Al  Ule.  señor  el  señor  Francisco  de 
Eraso  del  Consejo  de  S.  M.  y  su  secretario.— En  Madrid. 


Tomo  XXX.  10 


146 

Dentro  de  esta  (  (^opia  de  otra  de  carta  que  D.  Gar- 
carta  se  halla  la  co-  I  cía  de  Toledo  escribe  al  duque  de  Alca- 
pia  siguiente :         (  ^  á  ÍQ  de  hebrero  de  1566, 

Para  enviar  á  S.  M. 

Ilustre  Señor: 

A  los  13  del  presente  escribí  á  V.  S.  lo  que  se  ofrescia 
en  respuesta  de  la  suya  de  los  7 ,  el  duplicado  de  la  cual  en- 
vío con  esta ,  añadiendo  que  ayer  recibí  la  de  V.  S.  de  los  9 
del  mismo  con  el  despacho  de  S.  M.,  y  por  los  que  V.  S. 
habrá  tenido  debe  haber  visto  con  cuanta  instancia  manda 
S.  M.  que  se  provea  la  Goleta  y  Malta  de  la  gente  y  muni- 
ciones que  se  han  de  meter  en  ella,  y  que  para  este  efecto 
me  mande  V.  S.  dar  la  infantería  española  que  hay  en  ese 
reino ,  cometiéndome  que  yo  la  ponga  en  aquella  plaza  al 
tiempo  y  cuando  mejor  parescerá  que  conviene ,  juntamente 
con  la  demás  que  allí  ha  de  ir.  Y  porque  viendo  cuan  ade- 
lante está  el  tiempo,  y  que  no  conviene  perderle  como  V.  S. 
sabe ,  teniendo  respecto  á  esto  y  á  los  demás  viajes  que  es 
necesario  hacerse  con  las  galeras ,  me  he  resuelto  en  que 
cumple  al  servicio  de  S.  M.  que  V.  S.  mande  luego  partir 
á  D.  Sancho  de  Leiva  con  las  galeras  de  su  cargo ,  y  las  de 
Mari  y  Cabrio  Cervellon ,  y  que  traiga  en  ellas  toda  la  infan- 
tería española  que  estuviere  alojada  dentro  de  Ñapóles  y  en 
los  casales  convecinos,  y  que  se  venga  derecho  á  Mesina.  Y 
cumple  también  que  Y.  S.  sea  servido  de  mandar  luego  que 
camine  la  demás  gente  que  está  en  las  otras  partes  dése  rei- 
no y  venga  á  Ríjoles ,  porque  llegada  que  sea  se  pueda  em- 
barcar y  hacer  con  ella  el  viaje  que  parescerá  mas  convc- 
ni  /XX  OMoi 


147 

niente ,  ansí  para  asegurar  lo  de  la  Goleta ,  como  para  ganar 
el  tiempo  y  quedar  mas  desembarazado  para  hacer  lo  que 
queda.  Esto  es  lo  que  me  ocurre  escrebir  en  observación  de 
lo  que  S.  M.  me  ha  mandado.  Suplico  á  V.  S.  que  me  dó 
aviso  de  lo  que  determinare  y  ordenare  en  todo  con  la  mas 
brevedad  posible. 

Y  porque  me  hallo  aquí  mas  desproveído  de  dinero  de  lo 
que  sabría  encarescer ,  y  tengo  necesidad  de  alguna  suma 
para  esto  de  las  municiones  y  vituallas  hasta  que  venga  el 
dinero  que  S.  M.  ha  proveído  en  Genova,  suplico  á  V.  S. 
rae  haga  merced  de  emprestarme,  habiéndolos  de  esa  corle, 
treinta  mil  escudos ,  porque  no  se  pierda  tiempo  en  lo  que  se 
ha  de  proveer,  que  por  estar  firmada  de  mi  nombre  prome- 
to traerlos  ahí  de  contado  cuando  volvíere  de  Genova ,  ó  de 
pagarlos  sin  ningún  género  de  falta  al  dicho  retorno,  ó  de 
pagarlos  de  mí  propia  hacienda ,  que  la  rescibiré  muy  par- 
ticular en  esto. 

Este  reino  ha  servido  á  S.  M.  con  ciento  y  veinte  y  cin- 
co rail  escudos ,  que  es  lo  mas  que  ha  podido  hacer  según 
está,  y  porque  aquí  no  hay  bolsas  que  puedan  hacer  partido 
sobre  esta  suma,  seria  con  mucho  servicio  de  S.  M.  sí  V.  S. 
pudiere  hallar  ahí  cien  mil  escudos  de  á  12  tt.^  cada  escu- 
do anticipados,  los  cuales  se  han  de  cobrar  en  este  reino 
en  dos  tercias,  á  setiembre  que  viene  los  cincuenta  mil,  y 
los  demás  en  marzo  de  adelante;  y  en  los  intereses  desta 
anticipación  por  un  año  se  podrá  V.  S.  alargar  á  15  por 
100,  asegurando  libremente  que  la  misma  consignación  y  li- 
branza se  entregará  dende  luego  á  los  mismos  mercaderes 
que  hicieren  el  partido ;  y  si  temieren  que  esta  consignación 
se  les  podría  quitar  ó  alterar ,  digo  que  para  seguridad  de 
que  no  se  la  moveré ,  obligaré  la  hacienda  que  tengo  en  este 
reino,  para  que  el  dia  que  yo  sobre  esto  hiciere  novedad  pue- 


148 

dan  acudir  sobre  ellos.  Y  si  V.  S.  fuere  servido  de  prestar- 
me los  50  mil  escudos,  podian  venir  con  D.  Sancho  en  las 
galeras. 

Lo  que  V.  S.  me  escribe  por  su  carta  de  8  de  hebrero 
acerca  de  las  tablas ,  que  no  fué  en  la  memoria  de  qué  leñá- 
men  han  de  ser,  este  que  va  aquí  inserto  es  el  preciso  capí- 
tulo que  yo  escrebí  en  la  relación. 

Para  hacer  cien  casas  de  madera  de  50  palmos  de  largo 
y  35  de  ancho  para  alojar  los  soldados  á  razón  de  50  escu- 
dos cada  una,  en  tablas,  clavazón  y  hechura  montan  5,000 
escudos. 

Para  hacer  otras  seis  casas  grandes  de  madera  para  las 
municiones,  y  tres  para  las  vituallas,  y  otra  para  hospital, 
ú  500  escudos  cada  una ,  5,000  escudos. 

Para  todas  estas  cosas  son  menester : 

60,000  tablas  comunes  á  7  escudos  el  ciento. 
5,000  travos  á  6  tt.  *  cada  uno  con  otro. 

Clavazón  1,300  escudos. 

Así  que  diciendo  tablas  comunes  y  declarando  el  prescio 
deltas  y  de  los  travos ,  y  diciendo  también  para  qué  habían 
de  servir,  me  páresela  no  ser  necesaria  esta  particularidad, 
en  especial  habiendo  allá  muy  mayor  mas  juicio  para  consi- 
derar muchas  mayores  cosas  del  que  hay  acá  para  deman- 
dallas.  Torno  á  decir  que  las  tablas  y  travos  sean  de  la  ma- 
dera mas  barata  ó  que  mas  presto  se  pueda  haber,  y  de  los 
maestros  se  podrá  saber  las  suertes  de  travos  grandes  y  pe- 
queños han  de  ser ,  pues  saben  para  lo  que  han  de  servir ;  y 
pues  la  presteza  importa  el  todo,  torno  á  decir  que  lo  mas 
presto  es  lo  mejor.  Y  cuanto  al  decir  que  se  hallarán  dentro 
de  dos  meses  después  de  hecho  el  partido  deltas,  ya  V.  S. 
vée  que  es  muy  largo  el  tiempo  para  la  brevedad  con  que 
S.  M.  manda  que  se  metan  estas  cosas  en  la  Goleta;  y  si  esta 


149 

madera  se  hallara  acá  yo  no  escribiera  á  V.  S.  que  lo  pro- 
veyera allá ,  y  ansí  será  servido  mandarlo  considerar  todo 
y  cuanto  importa  la  brevedad.  Y  en  lo  del  plomo  es  necesa- 
rio que  V.  S.  mande  proveer  ahí  de  lo  demás  que  pudiere, 
que  lo  mismo  se  hace  acá. 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo.  Madrid 
iS  de  febrero  de  1566. 

f 

Nombramiento  del  prior  D.  Fernando  de  Toledo  para  capitán  ge- 
neral de  la  defensa  de  la  Goleta. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Sicilia :  Ya  habréis  recibido  las  cartas  que 
os  scribi  con  los  correos  que  mandé  despachar  el  mes  pasa- 
do, y  soy  cierto  que  habréis  puesto  diligencia  en  prevenir  lo 
de  las  vituallas  y  lo  demás  para  la  gente  que  se  ha  de  lle- 
var ahí,  así  para  la  Goleta  como  Malta,  specialmente  en  lo 
de  la  embarcación ,  según  os  lo  tengo  scripto.  Porque  no  se 
pierda  tiempo  he  mandado  ir  al  prior  D.  Hernando  de  Tole- 
do, á  quien  he  elegido  y  nombrado  por  nuestro  capitán  ge- 
neral de  la  defensa  de  la  dicha  plaza  de  la  Goleta ,  por  la 
calidad  y  méritos  de  su  persona  y  la  satisfacción  que  dél  ten- 
go,  y  le  habemos  dado  título  é  instrucción  que  os  comuni- 
cará de  lo  que  ha  de  hacer,  así  en  Italia,  como  llegado  ahí, 
y  cuando  haya  de  pasar  á  la  Goleta ,  ruégoos  y  encargóos 
dé  toda  la  diligencia  que  veis  que  conviene  en  lo  que  se  ha 


150 

de  proveer,  ordenándolo  como  mas  á  nuestro  servicio  con- 
venga. 

Y  porque  serán  menester  para  esta  jornada  cantidad  de 
zapas ,  palas  y  espuertas ,  picos ,  bocinas  y  otros  materiales 
que  veréis  por  el  memorial  que  va  con  esta ,  proveeréislo 
cumplidamente ,  que  por  ganar  tiempo  scribimos  al  visorey 
de  Ñapóles  enviándole  el  dicho  memorial  para  que  haga  ha- 
cer y  recoger  por  su  parle  las  cosas  en  él  contenidas ,  ó  lo 
mas  que  pudiere,  y  os  las  envíe  y  avise  luego  las  que  de  allí 
podrán  ir,  para  que  lo  otro  se  provea  dése  reino,  á  donde 
mas  brevemente  y  á  propósito  se  pudiere  hacer. 

Y  asimismo  porque  haya  provisión  de  artillería ,  aunque 
habemos  mandado  que  se  lleve  de  acá  alguna  cantidad,  por- 
que podría  ser  que  no  llegase  á  tiempo,  scribo  á  los  duques 
de  Saboya,  Florencia  y  Ferrara  y  señoría  de  Genova,  que 
nos  presten  las  piezas  que  pudieren  que  sean  á  propósito, 
juntamente  con  pólvora  y  pelotas ,  ofreciéndoles  que  les  man- 
daremos satisfacer  cumplidamente  á  su  contentamiento  lo 
que  dello  faltare,  de  que  os  habemos  querido  avisar  para  que 
lo  sepáis ,  y  que  habemos  scripto  al  dicho  embajador  que  ten- 
ga fletados  uno  ó  dos  navios  para  que  lo  envíe  á  ese  reino, 
donde  lo  haréis  recoger  para  que  vaya  á  buen  recaudo. 

El  dicho  prior  nos  ha  dado  por  memoria  que  seria  bueno 
hacer  provisión  de  paño ,  lienzo ,  zapatos  y  otras  cosas  para 
los  soldados,  y  cargárselo  á  los  precios  que  paresciere  en 
cuenta  de  su  sueldo.  Si  tuviéredes  comodidad  de  dinero,  ha- 
cerlo heis  comprar  de  contado,  porque  será  mejor  y  mas  ba- 
rato ,  y  sino  ordenareis  que  se  lome  asiento  con  algún  mer- 
cader sobre  ello. 

Y  terneis  cuidado  de  proveer  que  se  lleven  tiendas  para 
las  vituallas  y  municiones  y  hospital  que  ha  de  haber  para 
los  enfermos  y  botica  con  medicinas  para  curarlos  y  algu- 


154 

nos  buenos  médicos  y  cirujanos ,  pues  son  cosas  tan  nece- 
sarias. 

Puesto  el  ejército  en  la  Goleta  en  la  parte  y  lugar  que 
lleva  designado  el  prior ,  que  es  conforme  á  lo  que  os  scribí 
que  parece  lo  mas  conviniente ,  no  habiendo  de  ir  por  no  ba- 
jar el  armada ,  y  veniendo  dejando  de  ponerse  sobre  aquella 
plaza  é  ir  á  dar  en  otra  parte  de  nuestros  estados ,  comuni- 
careis con  el  dicho  prior  D.  Hernando  lo  que  converná  hacer 
y  proveer  según  las  ocasiones  y  subceso  de  las  cosas ,  que 
yo  os  lo  he  remitido  á  ambos  como  á  quien  las  terna  presen- 
tes, y  tan  maduro  consejo  y  celo  de  nuestro  servicio ,  como 
se  declara  en  la  instrucción  que  damos  al  dicho  prior ,  que 
dependiendo  lo  que  hubiere  de  hacerse  de  las  fuerzas  que 
trujiere  la  dicha  armada  y  de  lo  que  intentare ,  no  se  podria 
ordenar  y  proveer  de  acá  otra  cosa  con  la  brevedad  que  será 
menester. 

Y  por  la  dicha  instrucción  que  le  doy,  veréis  de  la  ma- 
nera que  ha  de  tratar  con  el  Rey  de  Túnez  ,  que  parece  lo 
mas  conviniente,  que  después  se  mirará  lo  demás  que  se  ha 
apuntado  y  vos  me  habéis  scripto. 

Y  si  la  dicha  gente  no  fuere  á  la  Goleta  y  la  que  quedare 
hubiere  de  hacer  jornada,  ó  en  otra  parte  saltando  en  tier- 
ra, nuestra  voluntad  es  que  sea  y  quede  por  capitán  general 
della  el  dicho  prior  D.  Hernando,  el  cual  os  ha  de  obedecer 
por  la  mar  y  estando  en  Seciha ,  según  allá  lo  veréis  por  lo 
que  le  ordenamos.  Y  cuanto  toca  á  las  vituallas,  artillería  y 
municiones  que  se  han  de  llevar  á  la  dicha  Goleta ,  vos  mi- 
rareis y  proveeréis  por  esta  vez  con  comunicación  del  dicho 
prior  los  oficiales  que  serán  menester ,  que  sean  personas  de 
confianza  y  de  cuenta  y  razón,  dándoles  las  instrucciones  que 
viéredes  ser  necesarias  para  que  tomen  suficientes  recaudos 
para  su  descargo  en  las  cuentas  que  han  de  dar,  y  seña- 


152 

lándoles  el  salario  que  hubieren  de  haber.  De  Madrid  á  diez 
y  ocho  de  febrero  de  mdlxvi  años. — Yo  el  Rey. — Francisco 
de  Eraso. 

Sobre. — Al  lile.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. 


Carta  original  del  gran  maestre  á  S.  M. ,  fecha  en  Malta 
á  22  de  febrero  de  1566. 

Justifícase  el  gran  maestre  de  la  carta  que  escribió  á  Su  Santidad 
en  11  de  setiembre  último,  dando  la  culpa  á  su  secretario,  que  era 
italiano. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm,  1131.^ 
S.  Maj.»   Gat."  : 

Aunque  la  experiencia  de  muchos  años  me  haya  mostra- 
do en  diversos  casos  la  poca  firmeza  que  en  esta  vida  hay  en 
ninguno ,  y  que  tras  haberme  librado  de  un  sitio  tan  traba- 
joso y  tan  pesado,  podia  sperar  por  descanso  de  mis  ya  vie- 
jos y  breves  dias  algún  contentamiento,  no  se  ha  servido 
Nuestro  Señor  dello,  antes  he  tenido  por  infelicidad  grande 
cualquiere  buen  suceso  que  en  esto  haya  habido  de  mi  parte, 
pues  ha  causado  según  la  información  que  tengo  que  V.  M. 
haya  concebido  sospecha ,  que  en  mí  no  haya  habido  el  agra- 
decimiento que  se  debe  al  real  socorro  que  V.  M.  nos  mandó 
dar.  Pues  ciertamente  por  mi  pensamiento  no  ha  pasado,  ni 
hay  en  mí  tanta  inconsideración  que  no  conozca,  como  sabe 
todo  el  mundo ,  que  fuimos  librados  con  solo  el  amparo  de 
V.  M. ,  y  sé  que  muchos  dias  antes  lo  había  ordenado  y  man- 
dado, y  siendo  esto  así,  me  excusa  aun  mas.  Si  en  la  carta 


155 

que  yo  escribí  á  Su  Santidad  á  los  xj  de  setiembre  hubo  al- 
guna inadvertencia ,  consistió  en  mi  secretario ,  que  es  ita- 
liano, pues  mi  intento  solo  fué  de  avisar  como  el  enemigo  se 
iba ,  y  hallarme  libre  del  mayor  peligro  en  que  jamás  estuvo 
hombre.  Era  mi  gozo  tanto,  que  cierto  yo  no  paré  en  esta 
carta,  la  cual  entiendo  ha  alterado  tanto  á  algunas  personas 
en  Italia ,  que  han  hecho  en  ella  mas  ponderación  de  la  que 
por  mí  ha  pasado,  inculpándome  acerca  de  V.  M.  de  ingra- 
titud y  poco  reconocimiento  deste  tan  notable  beneficio,  que 
cuando  en  mí  hubiera  caído  tanto  mal,  yo  mesmo  me  con- 
denara con  áspera  sentencia,  y  con  cualquiera  persona  desta 
vida,  estando  como  estoy  hbre  deslo,  lo  hubiera  fácilmente 
pasado  en  disimulación,  aguardando  que  el  tiempo,  que  es 
descubridor  de  toda  verdad ,  mostrará  lo  que  en  esto  fuera ; 
pero  con  Y.  M.,  á  quien  tanto  debe  esta  religión,  y  de  quien 
tan  speciales  favores  y  mercedes  he  recibido  yo ,  no  consiente 
mi  pureza  que  excuse  hacer  la  presente ,  y  decir  á  V.  M. 
que  me  ha  quebrado  y  atormentado  esto  tanto ,  que  demás 
de  haberme  aguado  y  enturbiado  el  contentamiento  de  ver 
libre  esta  religión  y  mi  persona ,  he  tenido  y  tengo  por  mal 
empleado  los  pocos  días  que  me  quedan  de  vida;  pues  al 
príncipe  á  quien  con  mas  cuidado  y  mas  fidelidad  he  deseado 
siempre  servir,  ques  V.  M. ,  hayan  querido  alguna  ó  algunas 
personas  fuerza  ( por  sus  fines  particulares  que  no  quiero  en 
esto  tratar  otra  cosa)  apartarme  de  la  buena  gracia  de  V.  M. 
Y  he  tenido  desto  tanto  sentimiento ,  que  si  los  tiempos  con- 
sintieran que  yo  me  apartara  de  aquí,  fuera  personalmente 
á  dar  á  V.  M.  la  satisfacción  que  soy  obligado,  y  tengo  en 
esto  la  razón  tan  de  mi  parle,  que  estoy  muy  persuadido 
quedará  V.  M,  con  toda  la  que  yo  deseo,  á  quien  certifico 
con  toda  verdad  que  aquel  ó  aquellos  que  de  mí  han  tomado 
esto  opinión  no  son  mas  vasallos  de  V.  M.  que  lo  soy  yo  en 


154 

la  voluntad  y  deseo  de  servirle ,  ni  con  mas  cuidado  ni  araor 
han  tratado  ni  pueden  tratar  las  cosas  que  fueren  de  su  ser- 
vicio. Y  sin  la  spiriencia  de  casi  sesenta  años  de  continua  re- 
sidencia que  ha  que  tengo  este  hábito  y  he  guiado  siempre  á 
este  íin ,  en  los  pocos  que  me  quedan  se  hallará  siempre 
abierta  y  clara  voluntad  en  esto,  no  excusando  hasta  mi 
propia  persona  como  lo  hecho  tantas  otras  veces.  Así  que 
suplico  á  V.  M.  con  aquella  humildad  que  puede  y  debe  una 
persona  de  mis  prendas  á  un  príncipe  tan  alto ,  sea  servido 
no  tener  de  mí  otro  concepto  que  del  hombre  del  mundo  que 
mas  se  ha  preciado  y  precia  en  agradar  y  servir  á  V.  M.  y 
que  con  mas  cuidado  desea  acertar  en  él,  para  el  cual  efecto 
me  ha  parecido  hacer  la  presente  porque  V.  M.  entienda  esto 
por  descargo  mió.  Cuya  S.  G.'^y  real  persona  guarde  Nues- 
tro Señor  y  conserve  feliscísimamente  como  desea.  En  Malta 
á  xxij  de  hebrero  de  1566. — De  V.  S.  G.  M.  humilde  ser- 
vidor.—  El  gran  maestre,  F.  Jehan  de  Vállete. 

Sobre  de  la  carta. — A  la  S.  Maj.'^  Gat.'^^ — En  manos 
del  Ule.  prior  D.  Antonio  de  Toledo. 


En  la  car- 
peta. 


Copia  de  minuta  de  carta  de  S.  M.  al  gran 
maestre,  fecha  en  el  Bosque  de  Segovia 
á  12  de  agosto  de  1566. 


Parece  respuesta  á  la  anterior 

Don  Felipe  por  la  gracia  de  Dios  ,  etc. 

Muy  Rev.*^°  y  de  gran  religión  maestre  del  convento  y 
urden  de  San  Juan  de  Hierusalen ,  nuestro  muy  caro  y  muy 
amado  amigo :  Todas  vuestras  cartas  he  recibido  hasta  la 
última  de  28  de  junio,  y  por  ellas  he  visto  el  continuo  cui- 


i55 

dado  que  tenéis  de  avisarme  de  lo  que  se  enlieiide  siempre 
de  la  armada  del  turco  y  de  sus  designios  y  mudanzas,  y  ser 
ñaiadamente  de  las  cosas  desa  isla  y  religión ,  y  de  la  fortifi- 
cación della ,  y  de  la  nueva  ciudad,  de  que  he  visto  el  de- 
signo que  me  enviastes,  que  me  ha  parescido  bien  y  que  no 
podrá  dejar  de  ser  acertada ,  por  haber  sido  primero  tan  re- 
conocido y  examinado  todo  por  vos  y  por  los  demás  que  lo 
han  visto,  como  por  personas  de  tanta  plática  y  expiriencia, 
y  he  holgado  mucho  de  entenderlo  por  vuestras  cartas,  y  os 
agradezco  y  tengo  la  cuenta  y  eslima  que  es  razón.  Y  no 
hay  para  qué  tengáis  tanta  pena  y  me  deis  tanta  satisfacción 
en  lo  de  la  carta  que  se  dijo  habiades  escripto  á  Su  Santidad, 
porque  teniendo  yo  tan  conoscido  vuestro  buen  ánimo  y  la 
afición  que  siempre  habéis  tenido  vos  y  todos  los  caballeros 
desa  religión  á  las  cosas  de  mi  servicio,  nunca  pude  yo 
creerlo,  ni  lo  creo,  sino  que  hubiese  sido  (si  alguna  falla  ha 
parescido)  descuido  é  inconsideración  de  alguno,  como  es- 
cribís, como  en  todas  las  cosas  suele  acaescer ,  y  así  en  toda 
esta  parte  vos  os  podéis  asegurar  de  la  entera  satisfacción 
que  tengo  de  vuestra  persona  y  ánimo  y  de  todas  vuestras 
acciones ,  y  asimismo  de  mi  voluntad ,  que  es  la  misma  y 
aun  mayor  para  todo  lo  que  os  tocare  á  vos  y  esa  religión, 
y  á  la  defensión ,  conservación  y  augmento  della,  como  des- 
pués acá  tenéis  experiencia  dello.  Y  porque  lo  demás  enten- 
deréis por  lo  que  el  prior  D.  Antonio  de  Toledo  del  nuestro 
Consejo  Destado  os  escribirá,  no  me  alargaré  mas  en  esta  de 
remitirme  á  aquello.  Y  sea  muy  reverendo  y  de  gran  reli- 
gión maestre  nuestro  muy  caro  amigo  Nuestro  Señor  en 
vuestra  continua  guarda.  Del  Bosque  de  Segovia  á  (I)  de 
agosto  de  MüLXvi. 

(I)  Así. 


456 


Copia  de  minuta  de  carta  de  S.  M.  para  el  gran  maestre, 
fecha  en  Madrid  á  ^  de  marzo  4566. 

Dice  que  ha  determinado  enviarle  seis  mil  hombres  y  por  jefes 
á  don  Pedro  de  Padilla  y  al  conde  Paris  de  Lodron. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  4454.) 

Con  el  capitán  Antonio  Maldonado  recibí  vuestra  letra 
(le  8  de  enero,  al  cual  oí  lo  que  de  vuestra  parte  refirió  par- 
ticularmente en  virtud  de  la  creencia  que  Iraia ,  y  os  doy 
muchas  gracias  por  lo  que  me  enviáis  á  decir  cerca  de  la 
fortificación,  provisión  y  lo  demás  que  loca  á  esa  isla,  que 
yo  tengo  por  muy  cierto  que  según  lo  que  siempre  ha- 
béis hecho  y  especialmente  hicistes  el  año  pasado  en  ser- 
vicio de  Dios  Nuestro  Señor,  conservación  y  autoridad  desa 
religión  no  hay  cosa  que  mas  deseis  que  continuarlo  y  lle- 
varlo adelante  como  de  persona  tan  principal  se  espera.  Y 
pues  veis  y  conocéis  lo  que  importa  la  defensión  de  lo  de 
ahí,  teniéndose  los  avisos  que  se  tienen  de  la  venida  de  la 
armada  del  turco  sobrella,  yo  os  ruego  afectuosamente  así 
lo  hagáis,  asistiendo  á  ello  con  el  cuidado,  diligencia  y  pro- 
videncia que  acostumbráis  y  es  menester.  Y  por  lo  que  don 
García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la  mar,  nos 
ha  escrito  últimamente  he  entendido  como  habia  enviado  al 
conde  de  Yicary  á  haceros  relación  de  la  provisión  que 
por  mi  parle  se  ha  hecho  para  la  defensa  desa  plaza,  y  á  re- 
presentaros lo  que  importaba  poner  desde  luego  mano  en  la 
fortificación ,  y  tengo  por  cierto  que  así  lo  habréis  proveído, 
especialmente  con  los  gastadores  y  gente  que  os  ha  enviado 
á  ofrescer  juntamente  con  la  de  las  vituallas  y  municiones, 


457 

en  lo  cual  también  ha  hecho  el  virey  de  Ñapóles  lo  que  ha- 
bernos escrito ;  y  por  la  afición  y  gran  devoción  que  tene- 
mos á  esa  religión  habernos  tenido  por  bien  que  demás  y 
allende  de  los  mil  españoles  y  dos  mil  alemanes  que  prime- 
ro determinamos  enviar  ahí ,  vayan  á  nuestro  sueldo  otros 
dos  mil  españoles  viejos  y  mil  alemanes ,  que  por  todos  sean 
seis  mil,  que  juntamente  con  los  tres  que  el  dicho  Maldona- 
do  ha  certificado  que  levantareis  y  juntareis  demás  de  los 
caballeros  de  la  orden  y  los  otros  5000  que  envía  Su  Santi- 
dad paresce  que  habrá  suficiente  número  de  gente ,  y  que  lo 
de  ahí  quedará  bien  proveído.  Y  escribimos  al  dicho  D.  Gar- 
cía sobre  la  lleva  y  embarcación  dellos ,  encargándole  que 
con  toda  brevedad  provea  que  se  metan  y  pongan  en  esa 
isla,  como  soy  cierto  que  lo  hará,  y  que  en  lo  de  las  vitua- 
llas y  otras  provisiones  que  fuese  menester  haga  todo  lo  po- 
sible como  lo  entenderéis ,  por  lo  que  os  escribirá ,  del  mas 
particularmente ;  y  los  dichos  mil  alemanes  han  de  ir  deba- 
jo del  mismo  regimiento  y  cargo  del  conde  París  de  Lodron, 
y  todos  los  españoles  llevará  á  cargo  D.  Pedro  de  Padilla,  á 
quien  habernos  elegido  y  nombrado  por  su  maestre  de  cam- 
po para  esta  presente  jornada,  los  cuales,  y  Ascanio  de  la 
Coma  que  será  ya  llegado ,  os  obedecerán  como  á  nuestra 
propia  persona :  y  sed  cierto  que  todo  lo  que  mas  se  pudiere 
hacer  de  nuestra  parle  para  la  deíensa  desas  plazas  se  hará 
con  la  voluntad  que  es  razón. 

Y  sea  muy  R.'^^'etc.  De  Madrid  á  5  de  marzo  de  4566 
años. 


tMí 


V) 

Carta  original  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo.  Madrid  % 
de  marzo  de  Í566. 


Aprueba  lo  que  escribió  al  gran  maestre  de  Malta  y  la  instruc- 
cian  que  dio  al  conde  de  Vicary — Alemanes — Avisos  de  Constanti- 
nopla — Españoles — Sitio  de  la  fortificación  de  la  Goleta — Bizcocho. 


(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Secilia.  Estando  escrita  la  que  va  con  esta  y 
para  despacharos  con  ella  un  correo ,  llegaron  vuestras  cartas 
de  veinte  y  seis  de  enero  y  dos  del  pasado ,  por  las  cuales ,  y 
los  avisos  que  habéis  enviado  de  levante ,  y  copias  de  las 
cartas  que  escribistes  al  gran  maestre,  y  instrucción  que 
distes  al  conde  de  Vicary ,  he  entendido  lo  que  le  enviastes 
á  decir  y  proponer ,  que  nos  ha  parecido  muy  bien ,  y  no 
solo  tengo  por  cierto  se  habrcá  aquietado  y  sosegado ,  pero 
que  habrá  dias  ha  comenzado  la  fortificación,  especialmente 
con  la  provisión  del  dinero  que  se  ha  hecho ,  y  con  haberle 
vos  enviado  á  ofrecer  gente  y  gastadores.  Y  cuanto  al  sitio 
que  han  de  lomar  la  gente  que  se  ha  de  meter  en  aquella 
isla,  por  esotra  carta  os  lo  remitimos,  y  en  esta  hacemos 
lo  mismo,  porque  concurriendo  las  dificultades  que  hay,  así 
en  lo  del  agua  como  en  otras  cosas ,  no  se  puede  de  acá  dar 
regla  cierta  en  esto ,  dependiendo  como  depende  del  estado 
en  que  estará  la  dicha  forlificacion  y  del  tiempo  que  darán 
los  enemigos. 


j 


159 

Y  en  lo  que  toca  ú  la  provisión  de  las  vituallas ,  aunque 
lo  que  habéis  enviado  á  ofrecer  al  dicho  maestre  de  dejár- 
selas sacar  dése  reino  libres  de  derechos  es  alguna  ayuda, 
teniendo  tan  poca  posibilidad  de  dinero ,  y  siendo  menester 
tanta  cantidad  porque  no  se  venga  en  nuevo  inconveniente, 
y  esté  todo  proveido  como  es  razón ,  nos  parece  todavía  que 
debéis  hacer  lo  que  en  esotra  carta  os  escribimos,  y  así  os 
lo  tornamos  á  encargar. 

En  lo  de  los  alemanes  que  mandamos  levantar  para 
Ñapóles  y  Lombardía ,  agradezcoos  el  cuidado  que  tenéis  de 
mirar  y  excusar  todo  el  gasto  que  se  pudiere ,  que  no  hay 
duda  sino  que  es  mucho  menester  según  nuestras  continuas 
necesidades  y  las  obligaciones  que  tenemos ;  pero  estando, 
como  ya  estará  hecha ,  y  no  sabiendo  lo  que  querrá  hacer 
la  dicha  armada  y  los  movimientos  que  podrían  subceder ,  y 
teniendo  respecto  á  que  la  gente  nunca  llega  tan  cumpli- 
da como  sale ,  parece  que  en  esto  no  se  debe  hacer  novedad. 

Y  como  quiera  que  los  avisos  que  enviáis  son  de  Gos- 
tantinopla  y  de  una  misma  data  y  tan  diferentes  el  uno  del 
otro ,  en  caso  de  duda  no  se  puede  ni  debe  dejar  de  hacer 
con  diligencia  la  nueva  provisión  que  por  esotra  carta  os  es- 
cribimos para  lo  de  Malta  y  la  Goleta,  sin  acortarla  en  nin- 
guna cosa ,  porque  con  esto  y  proveyéndose  á  tiempo,  como 
espero  en  Dios  que  se  hará,  ambas  plazas  se  asegurarán,  y 
visto  donde  se  prendará  de  propósito  la  dicha  armada,  así  se 
podrá  después  mirar  en  acortar  el  gasto  que  se  pudiere  y 
sufriere ,  ó  hacer  otros  efectos ;  y  no  embargante  lo  que  en 
esotra  carta  os  escribimos ,  visto  lo  que  ahora  decís ,  ha  pa- 
recido declarar  aquí  la  dicha  provisión  que  se  hace  al  capi- 
tán Antonio  Maldonado,  y  escribir  lo  mismo  al  dicho  maes- 
tre ,  porque  será  obligarle  mas  á  lo  que  debe  hacer ,  y  en 
esta  conformidad  le  podréis  vos  también  escribir,  dándole  á 


160 

entender  que  estimamos  en  tanto  lo  que  toca  á  la  defensa  y 
conservación  de  aquella  isla  y  de  la  religión  que  habernos 
querido  hacer  hacer  esta  nueva  provisión,  con  la  cual  y  coa 
lo  demás  que  Su  Santidad  y  él  proveen ,  creemos  estará  re- 
mediado yendo  á  tiempo. 

Y  cuanto  á  lo  que  apuntáis  de  que  se  debria  anticipar  el 
meter  en  la  Goleta  los  españoles  y  italianos  sin  esperar  los 
alemanes  por  la  dilación  que  podría  haber,  en  la  instruc- 
ción que  se  ha  dado  al  prior  D.  Hernando  veréis  como  se 
previene  este  punto ,  y  conforme  á  la  necesidad  y  á  los  bas- 
timentos y  provisiones  que  estuvieren  hechos  y  se  pudieren 
llevar,  porque  sin  esto  podria  subceder  algún  notable  incon- 
veniente, y  así  se  usará  de  lo  que  pareciere  mas  convenir. 

En  lo  del  sitio  he  visto  lo  que  particularmente  escribís, 
y  habiéndose  comunicado  y  tratado  acá  diversas  veces  con 
personas  que  tienen  noticia  de  la  calidad  del ,  ha  parecido 
que  aquello  es  lo  mas  conveniente,  según  lo  habréis  entendi- 
do por  el  designio  y  relación  que  se  os  ha  enviado;  pero  si 
cuando  fuéredes  á  llevar  los  doce  mil  infantes  pareciere  que 
no  queda  tiempo  para  la  fortitícacion ,  ó  se  juzgare  no  ser 
conveniente  digsinio,  ó  se  viere  y  conociere  que  en  otra 
parte  que  favorezca  á  la  Goleta  se  puede  hacer  algún  fuerte, 
ó  que  en  todo  ó  en  parte  se  deba  mudar  la  orden  que  sobre 
esto  habemos  dada  cerca  de  alojar  la  gente ,  os  mandamos 
que  comunicándolo  vos  y  el  dicho  prior  D.  Hernando  con 
Don  Alonso  Pimentel  y  las  otras  personas  pláticas  y  de  ex- 
periencia que  se  hallaren  allí ,  elijáis  y  hagáis  ambos  lo  que 
viéredes  mas  convenir  á  la  defensa  y  conservación  de  la  di- 
cha plaza  que  yo  lo  remito  á  vos  y  al  dicho  jirior  (1),  por- 
que de  acá  no  se  puede  en  esto  dar  regla  cierta  ni  puntual, 

(1)  Lo  de  cursiva  está  subrayado  en  el  original. 


16i 

y  aunque  siempre  se  traía  y  murmura  de  semejantes  cosas 
según  el  subceso  que  tienen ,  sed  cierto  que  cerca  de  mí  no 
os  empecerán  por  la  satisfacción  que  tengo  de  que  en  todo 
hacéis  lo  que  es  posible. 

Hános  parecido  bien  la  orden  que  habéis  dado  en  la  forti- 
ficación de  Agusta ,  y  la  isla  de  la  Mangúese  y  los  caballe- 
ros que  se  adrezan  y  se  hacen  de  nuevo  en  Zaragoza ,  que 
no  puede  dejar  de  ser  muy  útil  y  provechoso,  así  para  lo  de 
la  mar  como  lo  de  la  tierra ;  y  os  encargo  continuéis  lo  uno 
y  lo  otro ,  pues  costará  tan  poco  como  escribís ,  y  será  tan 
útil  y  provechoso ,  y  tenéis  consignación  para  ello  sobre  lo 
de  la  gabela.  Y  mucho  nos  satisface  lo  que  escribís  cerca 
de  las  pretensiones  que  nuestro  lisco  tiene  á  lo  de  Agusta, 
y  el  fin  y  propósito  que  tenéis  de  que  esta  plaza  esté  en 
nuestra  mano  siendo  de  la  calidad  y  importancia  que  es,  y 
de  la  resolución  que  se  tomare  nos  avisareis. 

La  provisión  de  los  quince  mil  quintales  de  bizcocho  que 
habéis  hecho  en  este  reino  es  muy  necesaria ,  y  aun  parece 
que  seria  menester  mas,  habiendo  de  juntarse  ahí  todas  las 
galeras  y  algunos  otros  navios.  Y  fué  bien  excusar  de  remi- 
tir acá  los  veinte  mil  ducados  que  esto  montará,  por  los  mu- 
chos intereses  que  costaran,  especialmente  que  de  los  cien 
mil  ducados  últimos  que  os  enviamos  el  año  pasado,  tomán- 
dose, como  se  han  de  tomar  dellos,  los  cincuenta  y  seis 
que  os  habemos  escrito,  teméis  la  resta  de  que  podréis  cum- 
plir esto  y  socorrer  las  galeras  que  son  á  nuestra  cuenta  y 
del  subsidio. 

El  virey  de  Ñápeles  nos  avisa  que  os  habia  escrito  que 
los  seis  mil  quiñi  ales  de  bizcocho  que  le  habíades  remitido 
que  hiciese  allí  seria  dificultoso  y  mas  costoso  por  la  falta 
que  hay  de  grano  en  Ñápeles ,  y  que  por  esto  era  mejor  que 
lo  hiciésedes  ahí  junto  con  alguna  mas  cantidad  para  las  ga- 
ToMO  XXX.  41 


1^ 

leras  de  aquel  reino,  para  lo  cual  os  enviaría  provisión  de 
dinero;  y  en  esto  y  en  lodo  haréis  lo  que  pudiéredes,  pues 
es  menester  que  de  todas  partes  os  ayudéis  según  la  posibi- 
lidad ó  necesidad  que  en  cada  una  de  ellas  hubiere ,  y  le 
escribo  con  este  tornándole  de  nuevo  á  encargar  encarecida- 
mente que  en  lo  que  toca  á  otro  género  de  vituallas  y  mu- 
niciones que  le  habéis  escrito  y  enviado  por  relación  que 
haga  hacer  allí  para  lo  de  la  Goleta ,  provea  que  se  entienda 
con  suma  diligencia ,  de  manera  que  no  haya  falta  ni  dila- 
ción; y  así  creo  que  lo  habrá  hecho  y  hará  conforme  á  lo  que 
le  enviamos  á  mandar  con  los  correos  que  partieron  á  diez 
y  ocho  y  veinte  y  cuatro  de  enero. 

Asimismo  nos  ha  escrito  que  viniendo  tres  naos  carga- 
das de  trigo  de  Pulla  á  Ñapóles  los  venecianos  las  tomaron  y 
llevaron  para  provisión  de  sus  tierras ,  de  lo  cual  os  habrá 
avisado ,  y  pues  ellos  han  enviado  ahí  por  asiento  hecho  con 
mercaderes  á  comprar  y  sacar  cincuenta  mil  túmbanos  de 
trigo,  habiéndose  mirado  y  comunicado  acá,  parece  que 
con  mucha  razón  y  justificación  se  les  puede  embarazar  la 
misma  cantidad  que  tomaron,  y  así  os  mando  que  ocurrien- 
do ahí  por  parte  de  la  ciudad  de  Ñapóles  después  de  estar  y 
tener  cargado  el  dicho  trigo  en  las  naos  que  han  enviado  ó 
enviaren  por  ello,  proveáis  que  se  les  embargue  y  entregue 
conforme  á  lo  que  el  dicho  virey  os  habrá  escrito ,  porque 
estando  aquella  ciudad  en  la  necesidad  que  está  no  se  debe 
hacer  otra  cosa ;  pero  si  os  pareciere  que  en  esto  hay  incon- 
veniente ,  haréis  en  ello  lo  que  os  pareciere  convendrá. 

He  visto  la  relación  que  enviáis  de  la  cantidad  de  vitua- 
llas ,  municiones  y  otras  cosas  que  se  han  de  hacer  para  la 
Goleta,  y  de  la  manera  y  en  las  partes  que  las  repartís,  y  me 
parece  que  está  bien,  y  si  en  unas  partes  faltaren,  se  provee- 
rán de  otras  para  que  haya  cumplimiento.  Y  el  embajador 


165 

de  Genova  nos  ha  escrito  que  la  pólvora  que  pedís  que  se 
juntase  allí  será  poca  por  no  haber  salitre,  y  que  lo  que  po- 
dría proveer  seria  arroz  y  no  otra  ninguna  cosa,  y  que 
para  la  infantería  alemana  que  se  ha  de  levantar  y  venir  á 
embarcar  en  el  Especie ,  converná  que  las  galeras  que  en- 
viáredes  por  ellos  traigan  vino  y  bizcocho.  En  lo  uno  y  en 
lo  otro  mirareis  lo  que  se  debe  hacer  y  proveer,  de  manera 
que  no  haya  falta,  que  de  acá  se  procurará  de  enviar  el 
pescado  salado  que  pedís,  y  si  se  pudiere  juntar  alguna 
cantidad  de  pólvora,  de  que  también  hay  acá  necesidad,  se 
hará  lo  mesmo. 

A  lo  demás  que  escribís  no  hay  que  responder,  porque 
por  los  despachos  pasados  habréis  visto  lo  que  en  todo  se 
ha  hecho  y  proveído ,  así  en  lo  del  dinero,  como  en  las  per- 
sonas que  habemos  elegido  para  que  lleven  la  infantería 
alemana  y  italiana  y  lo  demás.  De  Madrid  á  tres  de  marzo 
de  MDLXvi  años. — Yo  el  Rey. — Francisco  de  Eraso. 

Sobre.  Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  ge- 
neral de  la  mar  y  visorey  de  Secilia. 


n 


164 


Copia  de  caria  original  de  D.  Garda  de  Toledo  al  iluslre 
señor  el  señor  Francisco  de  Eraso.  De  Mesina  á  i^  de 
marzo  rfe  4566. 

Servicio  de  Sicilia — Desinterés  de  D.  García  de  Toledo — Es- 
clavos. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  id30.> 

Ilustre  Señor  : 

A  los  16  del  pasado  escribí  á  v.  m.  lo  que  se  ofrescia,  y 
porque  no  tengo  carta  de  v.  ra.  á  que  responder,  será  esta 
para  dalle  aviso  como  este  reino  ha  hecho  el  douativo  de  los 
125  mil  escudos  que  v.  m.  habrá  visto  para  ayuda  á  las  pro- 
visiones que  se  han  de  hacer  para  la  Goleta  y  Malta ,  y  para 
su  probeza  no  es  poco  lo  hecho ,  viniéndole  encima  el  paga- 
mento ordinario.  A  mí  me  han  dado  25  mil  escudos:  no  qui- 
se que  se  leyese  la  oferta,  ni  que  pasase  adelante,  ni  que  se 
escribiese  á  S.  M. ,  como  lo  querían  hacer,  ni  el  reino  está 
en  término  de  poder  tomar  el  ministro,  aunque  S,  M.  lo  man- 
dase, un  solo  maravedí,  antes  como  escribo  á  S.  M.  me  pa- 
resce  que  de  aquí  adelante  no  se  hagan  mas  estas  ofertas  al 
que  gobierna  ó  gobernare ,  y  en  esto  se  verá  con  el  interese 
que  sirvo  á  S.  M. 

Yo  tengo  aquí  en  las  galeras  de  S.  M.  una  buena  cuan- 
tidad de  esclavos,  los  cuales  creo  que  llegarán  á  cincuenta, 
y  por  no  tener  entrada  ni  salida  con  oficiales  ni  tener  traba- 
cuenta particular  sobre  cosa  propia  en  las  galeras ,  ha  año  y 
medio  que  bogan  en  estas  de  S.  M.  sin  haber  querido  que 
lleven  sueldo,  y  ansí  conviene  que  el  general,  aunque  lo  haga 


165 

tan  limpiamenle  como  lo  he  hecho  y  he  de  hacer  yo,  no  ten- 
ga cosa  por  do  pueda  pensar  el  oficial  que  le  hace  ningún 
placer,  ni  de  que  él  haya  de  sacar  provecho  particular.  Es- 
tos esclavos  yo  los  he  tenido  vendidos  á  ciento  y  veinte  es- 
cudos cada  uno  al  marqués  de  Terranova.  Háceseme  de  mal 
sacarlos  de  las  galeras  porque  son  pláticos  del  remo.  V.  m. 
sepa  de  S.  M.  si  los  quiere  para  ellas,  porque  sino  veré  de 
darlos  al  marqués  por  el  dicho  precio ,  y  á  esto  me  mande 
V.  m.  responder  con  el  primero;  y  entiéndase  que  estos  es- 
clavos son  míos  propios  y  no  de  los  que  se  han  tomado  con 
las  galeras,  porque  esos  en  las  de  S.  M.  están,  habiendo 
pagado  por  ellos  á  treinta  escudos ,  conforme  al  asÍ3nto. 

Háceseme  muy  de  mal  que  los  oficiales  de  S.  M.  tengan 
que  ver  comigo  en  nada,  como  tengo  dicho,  y  ansí  me  hará 
V.  m.  mucha  merced  en  suplicar  á  S.  M.  de  mi  parte,  que 
no  me  obligue  á  dar  muestra  á  sus  oficiales  de  los  veinte  gen- 
tiles hombres  que  tengo ,  porque  me  corro  que  siendo  tan 
poca  cosa  se  fie  dellos  y  no  de  mí,  y  por  vida  de  mi  hijo 
juro  que  pasan  de  mil  y  quinientos  escudos  los  que  yo  doy 
de  mi  hacienda  demás  de  los  que  S.  M.  me  da,  y  en  las  per- 
sonas que  yo  reparto  los  de  S.  M.  también  se  corren  de  ir  á 
dar  muestra  y  de  ser  escritos  en  sus  libros  por  quince  y  vein- 
te escudos  de  sueldo.  Y  Nuestro  Seííor  guarde  la  Ule.  perso- 
na de  V.  m.  como  desea.  De  Mesina  á  15  de  marzo  1566. 
— Servidor  de  v.  m. — Don  García  de  Toledo. 

Sobre  (le  la  caria. — Al  Ule.  señor  el  señor  Francisco  de 
Eraso  del  Consejo  de  S.  M.  y  su  secretario. 


166 
Dentro  de  esta  se  halla  la  copia  de  caria  siguiente  á  S.  M. 


Para  enviar  al  señor  Eraso. 


S.  C.  R.  M. 


Escrebí  á  V.  M.  el  servicio  que  este  reino  habia  hecho  y 
la  manera  dé!,  y  dije  que  cnviaria  á  V.  M.  lo  que  deman- 
darían, y  también  va  lo  que  de  acá  paresce  advertir  á  V.  M. 
sobre  ello.  Paresció  á  los  del  parlamento  darme  25  mil  es- 
cudos, ansí  como  lo  han  acostumbrado  hacer  con  otros  vire- 
yes,  y  porque  esta  costumbre  tomaba  ya  tanta  raiz  que  no 
podia  dejar  de  ser  dañosa  al  servicio  de  V.  M.  y  al  mismo 
reino ,  porque  es  claro  que  habiéndose  en  las  necesidades  de 
ponerles  toda  la  carga  que  pueden  sufrir,  lo  demás  que  die- 
sen seria  causa  de  ponerlos  en  excesivo  trabajo ,  y  también 
por  otras  razones  que  me  han  parescido  convenir  al  servicio 
de  V.  M.,  y  por  esto  cuando  me  vinieron  á  leer  la  oferta  y 
el  acto  hecho  sobre  ella  no  quise  consentir  que  se  leyese ,  y 
aunque  hicieron  sobre  ello  grande  hincapié  para  que  la  con- 
sintiese leer  y  para  que  la  aceptase ,  diciendo  que  en  parla- 
mento hablan  determinado  de  escrebir  á  V.  M.  suplicándole 
que  me  los  mandase  tomar  como  era  verdad ,  les  respondí 
que  sabiendo  yo  la  pobreza  que  habia  en  el  reino ,  no  habia 
de  entrar  tal  cosa  en  mi  casa;  y  haciéndome  nueva  instancia 
para  que  lo  aceptase,  en  fin  los  resolví  en  que  no  se  habia 
de  leer  ni  escrebir  á  V.  M.  ni  yo  los  habia  de  tomar,  y  que 
no  solo  me  contentaba  con  no  tomarlos,  pero  que  quería  que 
se  demandase  por  capitulo  de  cortes  que  de  aquí  adelante  no 
pudiesen  mas  hacer  semejantes  ofertas  á  ningún  virey  de 
ninguna  cuantidad,  y  que  yo  suplicaría  á  V.  M.  que  envíase 


i67 

este  capítulo  confirmado.  En  esto  también  tornaron  á  hacer 
nueva  instancia ,  y  viendo  que  estaba  determinado  y  resoluto 
en  ello,  se  han  contentado  de  lo  dicho,  y  ansí  suplico  á  V.  M. 
que  si  le  paresciese  convenir  á  su  servicio,  como  á  mí  me  lo 
paresce,  que  lo  mande  confirmar. 

Han  pedido,  como  Y.  M.  verá,  que  se  les  quite  la  gabela 
de  la  harina  y  se  ponga  la  de  pelo  y  merced,  y  tuve  la  mano 
en  que  no  se  hablase  en  este  negocio ,  sino  fuese  obligándose 
al  daño  que  V.  M.  rescibiria  cuando  se  concediese,  y  acla- 
rándoles que  los  cient  mil  ducados  que  han  de  hacer  bue- 
nos á  V.  M.,  si  se  quita  la  gabela  de  la  harina,  han  de  ser 
sin  lo  que  V.  M.  cobrare  de  la  gabela  de  Mesina,  de  manera 
que  V.  M.  gozara  de  los  cient  mil  ducados  de  la  gabela  de 
la  harina  convertidos  en  la  de  la  seda ,  y  gozara  también  del 
beneficio  que  diere  la  gabela  hoy  puesta  en  la  ciudad  de  Me- 
sina, y  esta  declaración  me  paresce  que  ha  importado  mu- 
cho. De  cobrar  en  la  extracción  de  la  seda  ó  en  el  mangane- 
lo ,  creo  que  irán  mas  de  siete  ó  ocho  rail  ducados  de  dife- 
rencia, porque  es  mas  útil  cobrar  en  el  mangando,  y  esto 
quedó  en  el  parlamento  pasado  á  arbitrio  de  V.  M.  Es  bien 
verdad  que  esta  cobranza  del  mangando  es  muy  dañosa  para 
los  pobres  y  muy  trabajosa ,  y  por  esto  desea  el  mismo  reino 
que  se  cobre  en  la  extracción.  También  les  he  declarado  que 
si  se  cobra  en  la  extracción ,  que  han  de  pagar  el  daño  que 
V.  M.  rescibe  y  se  contentan  dello,  y  aunque  no  lo  exprimen 
particularmente  en  esta  última  demanda ,  generalmente  se 
obligan  á  pagar  los  daños  que  V.  M.  rescibirá  que  son  los  di- 
chos ,  de  manera  que  con  esto  me  paresce  que  está  bien  acau- 
telado este  negocio,  y  que  puede  V.  M.  con  provecho  suyo  en- 
viarme la  concesión  deste  capítulo  aparte,  porque  con  d  en 
la  mano  pueda  tractar  de  la  observación  del  en  el  parlamento 
primero ,  que  será  deste  marzo  que  viene  en  un  año.  Y  es 


168 

bien  que  sepa  V.  M.  que  si  Mesina  viene  librada  por  justicia, 
que  V.  M.  perderá  toda  esta  cuantidad,  porque  si  el  reino 
no  la  podia  obligar  á  la  dicha  gabela  no  ha  de  pasar  por  ella, 
y  si  la  podia  obligar,  como  se  pretende  y  tiene  acá  por  cierto, 
todo  será  en  útil  de  V.  M.,  y  será  de  grandísima  importan- 
cia ,  porque  no  solo  será  en  lo  pasado ,  pero  aun  en  lo  por 
venir. 

Lo  que  V.  M.  dice  haber  yo  escrito  á  Vargas  que  se  de- 
clarase primero  lo  de  Mesina  que  venir  á  dejar  la  gabela  de 
la  harina ,  es  ansí ,  y  el  pedir  yo  las  cartas  para  la  convoca- 
ción del  parlamento  fué  creyendo  que  para  aquel  tiempo  es- 
tuviera ya  allá  declarada  dicha  pretensión ,  porque  acá  no 
veo  que  hay  doctor  en  todo  este  consejo  que  ponga  duda  en 
la  justicia  de  V.  M.,  y  las  razones  que  hay  para  ello  se  han 
enviado  á  V.  M.,  y  aunque  no  por  términos  de  leyes,  porque 
no  las  sé,  por  lo  que  he  colegido  destos  doctores  y  por  la 
plática  que  en  estos  casos  he  tenido  en  Cataluña ,  por  si  se 
pueden  obligar  en  casos  de  guerra  y  defensión  del  reino  las 
ciudades  particulares,  siempre  he  visto  tractar  que  sí,  y  el 
hecho  y  las  razones  me  acuerdo  yo  haberlas  escrito  á  V.  M. 
en  la  primera  carta  que  de  aquí  le  envié  sobre  esta  materia, 
de  la  cual  me  ha  parescido  tornar  á  enviar  la  copia,  aunque 
donde  ponen  la  mano  doctores ,  poco  importará  lo  que  yo  de 
mió  puedo  decir.  Pero  esta  materia  del  daño  que  estonces  es- 
crebí,  está  Bien  remediada  y  acautelada  con  lo  que  en  el  ca- 
pítulo de  atrás  escribo. 

Piden  en  su  memorial  que  se  reformen  todos  los  oficios  y 
tribunales  del  reino ,  y  que  se  hagan  pandectas  y  ordenacio- 
nes de  los  negocios  y  derechos  que  tocan  á  cada  oficio  y  tri- 
bunal ,  y  que  se  prohiba  que  so  grave  pena  ninguno  se  ex- 
tienda en  el  oficio  de  otro,  lo  cual  me  paresce  muy  justo,  y 
que  V.  M.  lo  debe  mandar  ansí ,  lo  cual  se  puede  efectuar 


CD  virtud  de  las  preniáglicas  y  conslUuciones  que  V.  M.  y 
sus  pasados  tienea  hechas  en  este  reino. 

En  el  cuarto  capítulo  piden  que  V.  M.  les  haga  merced 
que  habiéndose  de  dar  el  hábito  de  Santiago  á  las  personas 
que  V.  M.  les  concediere,  que  esto  se  cometa  á  los  que  lo 
tienen  en  este  reino  para  que  ellos  hagan  las  informaciones, 
porque  si  hubiesen  de  venir  de  fuera  para  este  efecto ,  se  les 
seguirla  mucho  interese  á  mas  de  la  dilación  del  tiempo ,  lo 
cual  me  paresce  cosa  justa  y  que  V.  M.  siendo  servido  se 
lo  debe  conceder. 

En  el  quinto  piden  que  en  los  parlamentos  que  se  harán 
en  este  reino  no  pueda  ninguna  persona  tener  mas  de  una 
voz  y  una  procura ,  y  que  en  el  brazo  espiritual  ninguno 
pueda  intervenir  que  no  sea  persona  eclesiástica ,  y  que  el 
tesorero  no  pueda  intervenir  en  dichos  parlamentos  por  los 
perlados  muertos.  Lo  que  á  mí  me  paresce  en  esto  es,  que 
V.  M.  lo  debe  mandar  dejar  como  se  estaba  y  que  no  se  in- 
nove nin^iina  cosa. 


170 


Copia  de  carta  original  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M., 
fecha  de  Mesina  á  16  de  marzo  de  1566. 

Avisos  de  Constantinopla  —  Le  participa  su  ida  á  la  Goleta  con 
varios  ingenieros  para  reconocer  aquella  plaza  —  Embarco  de  in- 
fantería española — Viaje  á  Cerdena,  Ñapóles  y  Genova  —  Envía  á 
Gabrio  Cervellon  á  examinar  la  fortificación  de  Malta — Resolución 
de  D.  Pedro  de  Mendoza,  general  de  las  galeras  de  la  orden  de  San 
Juan — Respuesta  de  D.  García  á  lo  que  pedia  el  comendador  Bur- 
gués en  nombre  del  gran  maestre. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  íiZO.J 

S.  G.  R.  M. 

A  los  16  de  hebrere  escribí  á  V.  M.  avisando  del  rescibo 
del  despacho  de  los  18  de  enero  en  que  se  me  ordenaban  las 
provisiones  que  se  habrán  de  hacer  para  la  defensa  de  las 
fuerzas  de  Malta  y  la  Goleta  en  caso  que  viniese  sobrellas 
larmada  del  turco,  y  envié  las  relaciones  particulares  que  se 
habrán  visto  de  lo  que  habia  ordenado  cerca  de  las  dichas 
provisiones,  juntamente  con  lo  que  me  ocurría  acordar  por 
servicio  de  V.  M.  en  lo  tocante  á  las  dichas  plazas.  Habiendo 
después  tenido  los  avisos  que  van  con  esta  de  lo  que  se  en- 
tiende de  larmada ,  me  ha  parescido  convenir  al  servicio  de 
V.  M.  despachar  el  presente  correo  para  acordar,  como  debo, 
lo  que  agora  se  me  ofresce  según  el  estado  en  que  se  hallan 
las  cosas,  ques  lo  que  se  sigue. 

Por  lo  que  por  los  dichos  avisos  se  puede  comprender, 
paresce  que  conforme  á  razón  se  ha  de  tener  por  muy  cierto 
que  el  turco  no  haya  de  enviar  este  año  en  estas  partes  ar- 
mada que  sea  muy  pujante ,  sino  cuando  mucho  de  número 


171 

de  cien  galeras ,  con  fin  que  juntándose  con  los  bajeles  de 
cosarios,  les  parescerá  hallarse  con  tantas  fuerzas  que  basten 
á  asegurar  sus  tierras  de  las  costas  de  la  marina  del  daño 
que  podrian  rescibir  del  armada  de  V.  M. ;  y  si  la  ocasión 
se  les  ofreciere ,  intentar  de  poner  á  saco  los  lugares  que 
juzgasen  poder  llevar  con  facilidad,  resolviéndose  en  esto 
según  las  ocasiones  y  las  fuerzas  con  que  entenderán  que 
está  la  armada  de  V.  M. ,  que  cuando  así  subcediese,  debrían 
cesar  la  mayor  parte  de  los  gastos  que  Y.  M.  ha  mandado 
hacer ,  siendo  todos  ellos  fundados  en  prosupuesto  quel  ar- 
mada haya  de  salir  con  mucha  pujanza ,  como  hastagora  se 
ha  tenido  entendido ;  y  así ,  cierto  me  han  puesto  estos  avi- 
sos en  una  muy  grande  ambigüedad,  porque  de  la  una  parte 
la  obligación  y  afición  que  al  servicio  de  V.  M.  tengo  me 
mueve  á  considerar  ser  cosa  conviniente  despachar  en  Ale- 
maña  al  capitán  Francisco  de  Eraso  para  que  no  levante  la 
infantería  que  se  le  ha  ordenado;  y  por  la  otra  sabiendo  que 
tengo  la  ley  en  escrito ,  y  habiendo  visto  por  experiencia  al- 
gunos otros  años  haberse  dicho  no  venir  larmada,  ó  traer 
poco  número  de  bajeles ,  y  después  subcedido  todo  al  con- 
trario ,  me  detiene  á  no  osar  tomar  resolución  en  cosa  tan 
grave  sin  orden  de  V.  M. ;  pero  juzgando  convenir  así  á  su 
real  servicio ,  me  ha  parescido  tomar  en  este  negocio  tan 
importante  los  medios  que  abajo  diré  que  son  escribir  con  el 
presente  correo ,  como  escribo  al  embajador  Figueroa  en  Ge- 
nova la  carta,  cuya  copia  va  con  esta,  para  que  tenga  la  ma- 
no en  no  dar  dineros  á  la  infantería  italiana  que  ha  de  levan- 
tar el  coronel  Césaro  de  Ñapóles,  entreteniendo  la  plática  con 
buenas  palabras,  sin  decir  la  causa,  paresciéudome  que 
cuando  los  avisos  del  armada  se  tornen  á  confirmar  de  que 
sale  con  pujanza ,  se  podría  de  nuevo  dar  priesa  al  dicho  co- 
ronel ,  que  habiendo ,  como  hay  agora  en  Lombardía  ,  tanta 


172 

abundancia  de  gente,  tengo  por  cierto  que  habrá  poca  difi- 
cultad en  levantarla  con  brevedad ;  pero  en  caso  que  el  em- 
bajador hubiese  dado  la  paga  á  la  dicha  gente,  V.  M.  será 
servido  de  ordenarle  que  camine  al  embarcadero ,  pues  de 
allí  se  podrá  despedir  siendo  necesario,  y  en  esta  misma 
conformidad  se  lo  escribo  yo. 

Para  evitar  el  gasto  de  la  infantería  alemana  que  tiene 
comisión  de  levantar  el  dicho  capitán  Eraso  (digo  de  la  que 
ha  de  servir  para  la  guardia  de  Malta  y  la  Goleta)  no  me  he 
osado  resolver  en  despacharle  para  que  no  la  levante  hasta 
ver  si  estos  últimos  avisos  se  van  confirmando,  con  prosu- 
puesto (en  caso  que  se  confirmen)  de  enviarle  orden  para 
que  alce  la  mano  en  hacer  la  dicha  gente;  pero  porque  mi 
despacho  irá  condicional ,  con  decir  que  entienda  haberlo  de 
hacer  así ,  no  habiéndole  V.  M.  enviado  á  mandar  de  nuevo 
otra  cosa ,  suplico  á  V.  M.  ordene  que  conforme  á  estos  avi- 
sos y  á  los  otros  que  por  ventura  podrán  haber  llegado  antes 
que  esta  por  via  de  Ñapóles  y  Venecia  se  despache  al  dicho 
Fj'ancisco  de  Eraso  con  el  orden  que  se  juzgare  ser  mas  ser- 
vicio de  V.  M. ,  advirtiendo  que  cuando  la  voluntad  de  V.  M. 
sea  que  todavía  se  levante  aquella  gente  no  obstante  estos 
avisos ,  se  le  escriba  que  lo  haga  así,  aunque  tenga  cualquier 
otra  orden  mia  en  contrario,  que  de  mano  en  mano  iré  despa- 
chando con  lo  que  mas  entendiere  de  los  dichos  avisos  y  go- 
bernándome conforme  á  ellos ;  y  el  ir  con  brevedad  el  despa- 
cho de  V.  M.  al  dicho  Eraso,  será  de  la  importancia  que  se 
puede  considerar ,  no  obstante  que  el  mió  hubiese  llegado 
primero. 

Entretanto  he  enviado  de  aquí  todas  las  galeras  que  se 
hallan  en  este  puerto  de  vuelta  de  la  Favignana  para  que 
puestas  allí  puedan  hacer  escolta  á  los  navios  que  pasan  de 
Ñapóles  y  á  los  que  van  desle  reino  á  la  Goleta  cargados 


175 

con  vituallas  y  municiones ,  y  yo  me  he  quedado  solo  con  la 
galera  capitana,  esperando  á  recoger  áD.  Sancho  de  Leiva, 
que  ha  de  venir  de  Ñapóles  con  las  de  su  cargo ,  el  cual 
haslagora  no  ha  venido,  aunque  he  solicitado  harto  estos 
dias  atrás ,  y  solícito  de  contino  al  duque  de  Alcalá  que  lo 
envíe;  y  cierto  me  tiene  con  muy  gran  pena  el  no  haber 
podido  partir  hastagora ,  como  lo  deseaba ,  que  ha  sido  por 
esta  causa  y  por  las  otras  que  abajo  diré.  Llegado  que  sea 
D.  Sancho,  me  partiré  para  la  Favignana,  y  juntando  las 
galeras  que  llevaré  con  las  que  allí  me  esperan,  iré  pla- 
ciendo á  Dios  á  la  Goleta,  cargando  en  ellas  todas  las  vic- 
tuallas  y  municiones  que  pudiere ,  haciendo  escolla  á  las  que 
se  hubieren  de  llevar  deste  reino  en  naves,  en  la  provisión 
de  las  cuales  se  usa  de  toda  la  diligencia  posible ;  y  he  es- 
crito á  Ñapóles  que  á  las  que  de  allí  parten  se  dé  orden  que 
llegadas  á  la  dicha  Goleta  no  descarguen  ninguna  cosa  hasta 
tenerla  mia ,  para  que  cuando  larmada  no  venga  (como  ar- 
riba digo)  no  será  necesario  que  se  desembarque  lo  mas  de 
lo  que  en  las  naves  va ,  y  se  podrá  tornar  ei  expidiente  que 
se  juzgare  convenir  en  la  distribución  de  aquellas  victuallas 
y  municiones ,  á  tal  que  no  se  pierda  el  dinero  que  en  ellas 
se  ha  gastado. 

Llegado  á  la  dicha  Goleta ,  á  donde  pienso  llevar  comigo 
á  Juan  Tomas  Escala  y  Jacobo  Santieri ,  ingenieros  de  V.  M., 
que  están  en  Ñapóles ,  los  cuales  he  escrito  al  visorey  de  allí 
que  me  envíe  para  se  los  tornar  en  viendo  aquello,  al  Fratin 
que  viene  despachado  de  V.  M. ,  quespero  de  hora  en  hora, 
al  ingeniero  Antonio  Conde  que  reside  en  este  reino,  á  Cabrio 
Cervellon  y  al  maestro  de  campo  Julián  Romero.  Procuraré 
con  el  parescer  destas  personas,  de  D.  Sancho  de  Leiva, 
D.  Alonso  Pimentel ,  y  de  los  capitanes  y  otros  que  me  pa- 
rescerá  que  sean  expertos  y  plálicos  en  semejantes  cosas,  do 


174 

reconoscer  aquella  fuerza  y  los  sitios  que  se  habrán  de  for- 
tificar, conforme  á  lo  que  V.  M.  me  ha  enviado  á  mandar,  y 
se  ordenará  que  se  ejecute ,  ó  se  dará  noticia  á  V.  M.  si  pa- 
rescerá  que  claramente  no  convenga  ejecutarlo ,  y  de  las  ra- 
zones que  para  ello  habrá ,  y  en  todo  se  procurará  de  hacer 
lo  que  mas  servicio  de  V.  M.  sea.  Aunque  yo ,  por  lo  que  se 
me  representa  de  aquel  lugar,  como  por  otras  he  escrito, 
tengo  la  gente  que  en  él  se  pusiere  al  presente  (cuando  lar- 
mada  del  turco  viniese  con  gran  poder)  por  muy  peligrosa, 
y  (á  mi  parescer)  es  negocio  de  mucha  consideración  por  la 
dificultad  que  ha  de  haber  en  poner  las  victuallas  y  por  otros 
respectos ,  aunque  ( conforme  á  la  ley  que  tengo  en  escrito) 
se  irán  preparando  y  proveyendo  las  cosas  que  se  me  han 
mandado  con  toda  la  diligencia  posible ,  sin  que  en  ello  se 
pierda  ningún  tiempo. 

Habiendo  visto  lo  de  la  Goleta ,  pienso ,  placiendo  á  Dios, 
partirme  de  allí  para  Cerdeña ,  y  embarcando  en  las  galeras 
la  infantería  española  que  se  halla  en  aquella  isla,  dejando 
primero  la  del  reino  de  Ñapóles  en  Marsala  y  Marzara  por 
llevar  desembarazadas  las  galeras ,  me  iré  la  vuelta  de  Ge- 
nova ,  á  donde  tomaré  resolución  en  el  embarcar  de  la  gente, 
según  lo  que  se  entendiere  del  armada  del  turco ,  que  no  me 
he  resuelto  en  meter  en  la  Goleta  los  soldados  del  tercio  de 
Ñapóles  ( como  habia  escrito  que  lo  baria  )  por  poner  primero 
dentro  la  victualla,  conforme  á  lo  que  V.  M.  me  envía  á 
mandar,  que  pues  también  en  esto  tengo  orden  particular, 
no  me  paresce  conveniente  hacer  yo  nuevos  discursos ,  sino 
observar  lo  que  se  me  manda,  porque  pensando  acertar,  no 
querría  que  me  subcediese  al  contrario.  Si  á  mi  llegada  á 
Genova  se  confirmaren  los  avisos  que  larmada  del  turco  no 
sale  en  mas  número  que  de  cien  galeras  (de  que  se  podrá 
tener  tanto  mayor  claridad  habiendo  vuelto  dos  fragatas  que 


175 

úllimamente  he  enviado  á  Levante),  tengo  intención  de  em- 
barcar la  infantería  española  del  tercio  de  Lombardía ,  y  con 
ella  y  la  que  está  en  Gerdeña ,  la  del  reino  de  Ñapóles  y  la 
deste  armar  todas  las  galeras  de  V.  M.  que  será  posible  que 
(á  mi  cuenta)  podrían  ser  las  que  por  otras  he  escrito,  pues 
conviene  que  vayan  muy  bien  armadas  para  lo  que  se  podrá 
ofrescer,  y  en  tal  caso  entendiéndose  que  el  número  de  los 
bajeles  de  los  turcos  podrían  ser  poco  superiores  ó  iguales  á 
los  de  V.  M. ,  procurar  de  armar  de  nuevo  con  brevedad  las 
mas  galeras  que  se  pudiesen  para  si  el  enemigo  pasase  á 
parte  á  do  á  la  vuelta  le  pudiese  ofender,  hacerlo,  ó  tomar  la 
resolución  que  según  las  ocasiones  se  juzgase  ser  mas  con- 
veniente el  servicio  de  V.  M. ,  y  á  este  fin  he  ordenado  que 
se  alisten  de  nuevo  en  este  reino  dos  mil  remeros  de  buena 
boya ,  y  se  aderescen  los  buques  que  aquí  hay  desembaraza- 
dos ,  y  juntamente  con  esto  he  escrito  al  visorey  de  Ñápeles 
que  los  remeros  que  estos  días  atrás  le  escribí  que  se  hicie- 
sen en  aquel  reino ,  y  después  le  avisé  que  se  estuviesen  en 
las  tierras  hasta  otra  orden ,  paresciéndome  que  con  todas 
las  galeras  que  pudiésemos  armar  eramos  muy  inferiores  al 
enemigo,  que  agora  los  tenga  apercibidos  y  á  punto  para  el 
primer  aviso,  y  los  buques  que  se  han  fabricado  nuevamente 
con  sus  remos ,  jarcias  y  otros  aparejos  necesarios ,  á  tal  que 
juzgando  que  V.  M.  se  puede  servir  dellos  no  se  pierda  tiempo 
en  las  ocasiones  que  se  ofrescerán ,  porque  así  como  siendo 
larmada  del  enemigo  del  número  que  primero  se  certificaba, 
no  habia  para  qué  reforzar  la  de  V.  M. ,  pues  con  ninguna 
diligencia  no  podíamos  igualar  con  él ,  así  no  trayendo  mas 
número  de  bajeles  del  que  al  presente  se  entiende  que  trae, 
podría  ser  esto  de  muy  gran  momento ,  y  V.  M.  será  servido 
de  mandar  escribir  de  nuevo  al  dicho  visorev  solicitándosele 


I 


r76 

la  diligencia  que  en  ello  se  habrá  de  usar ,  aunque  tengo  en* 
lendido  que  antes  que  llegue  el  despacho  de  V.  M.  lo  terna 
él  todo  á  punto. 

Los  alemanes  que  se  habrán  levantado  para  Lombardía 
no  se  podrán  despedir,  pues  han  de  servir  los  españoles  de 
aquel  tercio  en  las  galeras,  como  arriba  digo;  pero  si  place 
á  Dios  que  larmada  del  turco  no  se  halle  mas  pujante  de  lo 
que  se  presupone ,  procuraré  ( si  no  hubiere  cosa  que  lo  es- 
torbe) que  se  vuelvan  lo  mas  presto  que  fuere  posible  á  sus 
alojamientos  por  quitar  aquella  costa  á  V.  M. 

Digo  arriba  en  esta  carta  que  me  he  entretenido  en  no 
partir  de  aquí  por  esperar  las  galeras  que  trae  D.  Sancho  de 
Leiva  y  por  otras  causas ,  que  son  esperar  asimismo  á  Asca- 
nio  de  la  Gorna,  que  he  entendido  que  ha  llegado  á  Ñapó- 
les, porque  no  habiéndose  dado  en  Malta  ningún  principio 
en  la  fortificación  del  monte  de  San  Telmo ,  ni  en  las  trin- 
cheas  del  sitio  de  Santa  Margarita,  conforme  á  la  orden  y 
parescer  de  V.  M.,  ni  quedado  ya  tiempo  si  larmada  viniese 
para  poder  asegurar  en  ninguno  destos  dos  sitios  la  gente 
que  allí  se  ha  de  poner,  tengo  por  cierto  que  todo  lo  que 
V.  M.  en  este  caso  ha  mandado  proveer  viene  ya  á  ser  fuera 
de  tiempo ,  por  el  descuido  que  acá  se  ha  tenido  en  poner 
mano  á  la  labor.  Llegados  que  sean  el  dicho  Ascanio  y  Ga- 
brio  Gervellon ,  al  cual  he  enviado  con  una  galera  á  reconos- 
cer  el  estado  en  que  se  halla  lo  de  aquella  isla ,  para  ver  si 
hay  forma  en  el  poco  tiempo  que  queda  de  dar  algún  reme- 
dio con  que  se  pueda  hombre  fiar  de  poner  allí  la  dicha 
gente ,  se  tomará  la  resolución  que  mas  convenga  al  servi- 
cio de  V.  M. 

Scribí  á  V.  M.  los  dias  pasados  que  habia  enviado  al  al- 
férez Benavides  á  Malta  con  el  despacho  de  V.  M.  para  el 


177 

maestre.  La  respuesta  que  rae  trajo  fué  los  cuatro  renglones 
que  aquí  envío,  y  aunque  el  dicho  alférez  solicitó  que  se  le 
diese  Ireslado  del  memorial  que  el  maestre  me  quería  enviar, 
no  pudo  haberlo.  Doce  dias  después  de  venida  esta  respues- 
ta, llegó  el  comendador  Burgués  enviado  por  el  dicho  maes- 
tre y  me  dio  el  memorial  que  aquí  va,  juntamente  cou  lo 
que  se  le  ha  respondido.  Háme  dicho  este  comendador  que 
no  trae  orden  de  aclararme  si  el  maestre  quedará  en  la  isla 
viniendo  larmada;  pero  particularmente  me  ha  certificado 
que  en  tal  caso  él  y  el  Consejo  se  saldrán  de  la  dicha  isla,  y 
que  quedarán  muchos  caballeros  particulares  que  por  su  vo- 
luntad no  querrán  desamparar  aquello.  Y  el  alférez  Benavi- 
des  me  ha  también  dicho  por  cierto  que  cuando  estuvo  allí 
entendió  que  los  caballeros  españoles  decían  que  por  ser 
aquella  casa  de  V.  M.  querían  todos  morir  en  ella,  y  que  así 
lo  había  propuesto  D.  Pedro  de  Mendoza,  que  es  agora  ge- 
neral de  las  galeras  de  aquella  orden  en  Consejo. 

Cuando  larmada  del  turco  no  viniese  este  año  con  mas 
fuerzas  de  las  que  arriba  se  dice ,  y  fuese  V.  M.  servido  que 
se  atendiese  á  la  seguridad  de  lo  de  Túnez ,  como  en  otra  he 
escrito,  y  que  se  hiciese  algún  salto  en  Berbería  para  dañar 
á  los  enemigos  y  haber  chusma  para  las  galeras,  en  tal  caso 
seria  yo  de  parescer  que  para  lo  uno  y  lo  otro  sesperase  al 
principio  del  mes  de  agosto ,  de  manera  que  fuese  en  sazón 
que  cuando  bien  larmada  del  turco  nos  lo  quisiese  estorbar, 
estuviese  el  tiempo  tan  adelante  que  no  pudiese ,  pues  nos 
quedaría  á  nosotros  tanto  que  nos  bastase  para  lo  que  en 
aquello  se  hubiese  de  hacer,  y  ellos,  habiendo  de  retirarse  á 
invernar  en  Constantinopla,  se  hallarían  tan  lejos  en  su  via- 
je, que  no  podrían  volver  á  favorescer  los  que  quedasen  en 
la  costa  de  Berbería,  pues  antes  que  supiesen  lo  que  hiciese 
larmada  de  V.  M.,  habrían  ya  pasado  veinte  ó  treinta  dias 
Tomo  XXX.  42 


178 

(le  tiempo.  Háme  parescido  tocar  al  presente  este  punto  para 
que  V.  M.  tenga  sazón  de  enviarme  á  mandar  en  él  lo  que 
mas  convenga  á  su  servicio. 

Queda  agora  que  si  al  rescibir  desta  no  se  han  despa- 
chado D.  Alvaro  de  Bazan  y  Juan  Andrea  Doria ,  V.  M.  man- 
dará ordenar  que  se  despachen  sin  ninguna  dilación ,  por- 
que las  galeras  del  cargo  del  primero  tienen  largo  viaje  que 
hacer ,  y  las  del  segundo  tengo  por  cierto  que  no  saldrán  de 
Genova  sin  su  presencia,  y  no  estando  en  orden  estas  dos 
bandas  de  galeras,  se  podrá  hacer  mal  el  fundamento  que  se 
presupone  de  igualar  nuestras  fuerzas  á  las  del  enemigo.  Y 
asi  suplico  á  V.  M.  mande  considerar  mucho  lo  que  todo  esto 
importa,  y  ordene  que  se  provea  y  resuelva  con  brevedad, 
conforme  á  lo  que  se  juzgare  convenir  mas  á  su  servicio,  por- 
que si  V.  M.  manda  usar  de  diligencia  en  ordenarme  lo  que 
tengo  de  hacer,  la  respuesta  me  podria  tomar  en  Genova, 
y  el  correo  podrá  traer  dos  duplicados  del  despacho ,  uno 
que  me  deje  allí  en  caso  que  no  me  hallare ,  y  pasar  con  el 
otro  á  Ñapóles  y  á  este  reino,  advirtiendo  que  ha  de  traer 
el  dicho  correo  por  instrucción  que  al  pasar  por  Roma  se  in- 
forme si  yo  estuviere  en  Givilavieja  embarcando  la  gente 
de  Su  Santidad,  para  poderme  llevar  allí  los  despachos. 
Nuestro  Señor  la  real  persona  de  V.  M.  guarde  por  muy  lar- 
gos años  y  en  mayores  reinos  acresciente  como  sus  vasallos 
y  criados  deseamos.  De  Mesina  á  16  de  marzo  1566. 

Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos 
besa. — Don  García  de  Toledo, 


479 


Copia  de  otra  carta  que  el  gran  maestre  escribió  á  D.  Gar- 
da de  Toledo  á  xxuii  de  hebrero  1566. 

Para  enviar  á  S.  31. 

III."**  y  Exmo.  Señor  : 

El  alférez  Benavides ,  portador  de  la  presente ,  me  trajo 
las  cartas  de  S.  M.  y  de  V.  E.;  y  por  que  enviamos  expre- 
samente al  comendador  fray  Francisco  Burges  para  que  á 
boca  tráete  con  V.  E.  el  particular  desto,  me  remitiré  á  lo 
que  de  nuestra  parte  dirá  el  dicho  Burgués  á  V.  E.,  con 
quien  respondo  á  las  de  S.  M.  también,  y  así  en  esta  no 
tengo  otro  sobre  que  alargarme.  Guarde  Nuestro  Señor  y 
prospere  la  111."''  persona  de  V.  E.  como  desea.  En  Malta 
á  24  de  hebrero  1566. 

Servidor  de  V.  E. — El  gran  maestre,  Juan  de  Válete. 

Respuesta  que  D.  García  de  Toledo  ha  hecho  á  lo  que  el 
comendador  Burgués  le  dijo  de  parte  del  gran  maestre. 

Habiéndome  v.  m. ,  señor  comendador  Francisco  Bur- 
gués, presentado  anoche  xi  del  presente  mes  de  marzo 
de  1556  una  carta  del  111.™*'  señor  gran  maestre  de  la  data 
de  xxu  de  hebrero  próximo  pasado  en  creencia  suya,  y  jun- 
tamente con  ella  una  memoria  de  lo  que  en  virtud  de  ella 
se  pide ,  la  cual  contiene  cinco  demandas  que  son  las  si- 
guientes : 

La  primera  es ,  los  x  mil  ducados  de  municiones  que  el 
Rey  nuestro  señor  manda  dar. 

La  segunda  otros  x  mil  para  victuallas. 

La  tercera  las  tractas  ordinarias  para  la  gente  de  la  isla. 


180 

La  cuarta  las  tractas  de  la  religión. 

La  quinta  la  extracción  para  las  dos  galeras.  í^j 

Y  ansimismo  se  pide  en  ella  lo  que  se  debe  á  la  reli- 
gión, y  ni  mas  ni  menos  algunas  piezas  de  artillería,  sobre 
la  cual  no  se  responderá  aquí  nada ,  porque  bien  sabe  su 
señoría  111.""^  que  no  hay  en  este  reino  la  que  es  menester 
para  la  guardia  del. 

Lo  que  se  responde  á  lo  de  arriba  contenido ,  es  que 
para  tomar  resolución  con  la  luz  que  conviene  será  nece- 
sario saber  si  el  señor  maestre  y  religión  han  de  quedar  á 
la  defensa  de  Malta ,  porque  con  este  fin  y  presupuesto  en- 
tiendo yo  que  da  el  Rey  nuestro  señor  estos  veinte  mil  escu- 
dos y  no  de  otra  manera;  y  por  esto  conviene  saber  lo  di- 
cho, pues  habiéndooslo,  señor,  preguntado,  me  respondéis 
que  no  tenéis  orden  de  decírmelo;  pero  porque  en  este  me- 
dio que  se  sabe  esta  resolución  no  se  pierda  mas  tiempo  del 
perdido,  digo  que  en  lo  que  loca  á  las  tratas  de  la  religión 
y  de  la  isla ,  no  obstante  que  no  habiendo  pueblo  en  ella  no 
habrá  quien  lo  coma,  porque  habiéndose  pasado  el  dicho 
pueblo  en  Sicilia  se  le  da  dos  veces ,  y  que  no  quedando  en 
Malta  la  religión  seria  lo  mismo ,  me  contento  de  dar  todo  lo 
que  esto  montare,  y  mas  si  mas  fuere  menester ,  con  tal  que 
se  den  aquí  fianzas  questa  victualla  será  llevada  á  Malta  y  co- 
mida allí  sin  sacarla  para  otra  parte ,  y  lo  mismo  haré  en  lo 
que  quedaren  á  haber  las  dos  galeras  de  S.  S.*  111.™* 

Cuanto  á  los  x  mil  ducados  de  victuallas  también  las  daré 
luego ,  nombrándose  en  qué  cosas  las  quieren ,  y  podrán 
hacer  que  á  la  compra  dellas  intervengan  sus  oficiales  jun- 
tamente con  los  de  S.  M. ,  y  harán  que  sus  galeras  las  co- 
miencen á  acarrear  y  llevar ,  que  por  mí  no  quedará  el  ha- 
cérselas consignar  luego  que  hayan  declarado  en  qué  las 
quieren,  hasta  la  dicha  suma. 


184 

Y  lo  mismo  digo  en  los  otros  x  mil  ducados  para  las  mu- 
niciones, las  cuales  por  no  tenerlas  en  este  reino,  se  han 
enviado  á  comprará  Genova,  Ñapóles,  Florencia  y  Luca;  y 
esta  suma  yo  la  traeré  en  las  galeras  y  las  meteré  dentro  en 
la  isla,  de  manera  que  lleguen  á  tiempo  para  su  defensa;  y 
si  por  caso  que  S  M.  entendiese  questos  xx  mil  ducados  de 
lo  uno  y  de  lo  otro  se  han  de  dar  quedando  la  religión  en  la 
isla  y  no  de  otra  manera ,  en  tal  caso  que  la  religión  sea 
obligada  á  la  restitución  dellos.  i-^ 

En  lo  que  toca  á  lo  que  se  debe  á  la  religión  ,  conforme 
á  lo  que  se  tracto  con  el  comendador  Maldonado  el  mes  de 
noviembre  próximo  pasado ,  digo  de  nuevo  que  lo  cumpliré 
aceptando  las  partidas  que  hay  de  una  parte  y  de  otra  en 
pro  y  contra ,  y  en  este  medio  como  cosa  principal  y  de  que 
depende  todo  este  negocio,  ha  de  venir  la  resolución  de  si  el 
señor  maestre  y  la  sacra  religión  han  de  quedar  en  Malta  ó 
no ,  para  ejecución  destas  cosas  que  se  tractan  ,  y  de  otras 
cosas  que  convernán  ejecutarse. 

Y  si  el  gran  maestre  y  sacra  religión  se  quisieren  proveer 
de  otras  cosas  en  este  reino  por  su  dinero,  se  les  dará  toda 
la  ayuda  y  favor  que  se  pudiere.  Y  porque  el  memorial  no 
tracfaba  de  la  fortificación  del  monte  de  San  Telmo,  no  res- 
pondí ayer  particularmente  á  este  punto ,  en  el  cual  digo  que 
cuanto  á  la  fortificación  del  monte  de  San  Telmo  estoy 
prompto  para  enviar  luego  persona  con  los  30  rail  ducados 
como  S.  M.  manda,  y  que  si  monseñor  tuviere  falta  de  gas- 
tadores ,  yo  le  enviaré  mil  ó  mas  para  que  comience  la  obra 
cuando  él  quisiere  poner  mano  en  ella ,  ansí  como  se  lo  he 
ofrescido  en  diversos  tiempos. 


182 


Avisos  de  Conslantinopla  de  25  de  hchrero  de  i 566,  que 
se  citan  en  la  caria  de  D.  Garda. 

Para  enviar  al  Sr.  D.  García  de  Toledo. 

Por  cartas  de  Conslantinopla  de  los  23  de  hebrero  1566. 

Que  se  atendía  con  diligencia  á  juntar  caballos  para  los 
genizaros  y  á  apercibirse  para  ir  el  turco  en  persona  á  la 
guerra  de  Hungría. 

Que  el  sultán  Selim,  su  hijo,  á  los  15  de  marzo  pasarla 
con  su  ejército  á  Galípoli ,  y  de  allí  irla  á  esperar  á  su  padre 
á  Andrinópolis. 

Que  el  turco  pensaba  salir  en  campaña  al  principio  de 
abril  y  hacer  su  pascua  en  la  dicha  Andrinópolis  á  los  21 ,  y 
dende  allí  marchar  la  vuelta  de  Hungría. 

Que  dejarla  por  gobernador  de  Gonstantlnopla  á  Scandcr 
bajá,  que  habla  venido  de  los  confines  de  Persia. 

Que  se  armaban  cuatro  galeotas  para  llevar  por  el  Da- 
nubio veinte  arráeces  los  mejores  del  armada ,  y  para  la  per- 
sona del  turco  llevaban  un  bergantín  nuevo ,  y  se  aderezaba 
su  galera  para  llevarla  asimismo  por  el  Danubio, 

Que  habla  enviado  cuatro  galeras  con  otros  muchos  na- 
vios cargados  de  pólvora  y  pelotas  á  la  boca  del  Danubio. 

Que  larmada  como  tantas  veces  han  avisado  se  iba  po- 
niendo en  orden ,  y  se  decía  por  cosa  cierta  que  no  serian 
mas  de  cient  galeras  para  la  guarda  del  Archipiélago ,  y  que 
en  ella  se  embarcarían  docientos  caballos. 

Que  hacían  diversos  discursos ,  y  entre  ellos  que  el  ge- 
neral, por  consejo  de  un  renegado,  vcrnía  á  Malta  la  Vieja, 
porque  le  ha  dado  á  entender  que  en  ocho  días  se  tomará. 
Otros  decían  que  darla  una  pasada  por  Pulla ,  y  otros  por 


i85 

Cíilabria ,  y  que  para  esle  efecto  embarcaban  los  docienlos 
caballos,  y  otros  decían  y  certificaban  que  entraría  en  el  golfo 
de  Venecia  y  iría  á  Fiume ,  lugar  del  emperador  en  el  dicho 
golfo ,  para  impedir  el  paso  á  los  ríos  para  que  no  pueda  pa- 
sar gente  en  Hungría. 

Que  si  larmada  de  S.  M.  se  hallase  junta  en  Mesina, 
aquella  no  saldría  de  la  guardia  del  Archipiélago,  y  que  con 
todo  esto,  es  bien  que  los  lugares  de  marina  estén  guardados. 

Que  larmada  no  será  para  poder  poner  asedio  este  año. 

Que  á  los  7  del  dicho  mes  de  hebrero  el  turco  hizo  alzar 
mano  de  las  galeras ,  y  no  quiere  que  se  aderescen  las  vie- 
jas, ni  que  se  acaben  las  nuevas ;  pero  ha  mandado  que  vaya 
la  maestranza  al  Mar  Mayor  para  que  este  verano  se  hagan 
las  setenta  galeras  nuevas. 

Que  se  decía  que  la  dicha  armada  saldría  de  Gonstantí- 
nopla  por  todo  el  mes  de  marzo ,  y  que  en  aquel  puerto  no 
se  cargarían  en  ella  mas  de  x  mil  quintales  de  bizcocho;  los 
demás  los  irán  á  cargar  á  Negroponle  y  otros  lugares. 

Que  se  apercebía  gran  cantidad  de  bizcocho ,  harina  y 
cebada  para  enviar  al  campo  en  Hungría. 

Que  se  decía  que  el  turco  mandaría  salir  de  Tripol  Lucha- 
li  calabrés ,  y  que  enviaría  en  su  lugar  Sirocco  arráez  que 
está  en  Alejandría,  y  que  á  Luchalí  le  da  un  san-jacato  de 
Lepanto,  y  en  Alejandría  envía  á  Cortogoli,  su  hijo  mayor. 

Que  afirmaban  que  el  capitán  de  la  mar  con  estas  cien 
galeras  pensaba  pasar  en  Alejandría  y  correr  toda  la  costa 
de  Berbería  hasta  el  Estrecho  de  Gibraltar  y  llevar  consigo 
todos  los  bajeles  leventes ,  y  reconoscer  todos  los  puertos  de 
aquella  costa ,  y  que  después  piensa  correr  la  costa  de  Es- 
paña dentro  del  Estrecho ,  y  á  la  Provenza ,  y  á  la  ribera  de 
Genova  y  á  otras  costas  hasta  el  Faro  de  Mesina,  y  á  donde 
verá  mas  la  comodidad  de  hacer  alguna  presa. 


184 

Que  á  los  20  partió  el  turco  para  la  Nalolia  á  la  caza,  y 
á  la  misma  hora  Mahomet  bajá  fué  al  tarazanal  y  mandó  que 
se  retirasen  todas  las  galeras  á  la  escala  de  Pera ,  á  la  cual 
se  daba  mucha  priesa ,  y  se  decía  que  enviarían  algunas  de- 
ltas á  Alejandría. 


Carla  de  S.  Pió  5.°  á  D.  Garda  de  Toledo.  Roma  22  de 
marzo  de  1566. 


Dentro  de  la  original  lulina  está  la  traducción  de  letra  coetánea  ,  con  la  respuesta  de 

DonGarciu. 


Dice  que  el  gran  maestre  de  Malla  se  queja  de  no  haber  podido 
hacer  gente  en  Sicilia,  y  ruega  á  D.  García  que  le  ayude  en  todo 
cuanto  pueda. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidoma.) 

Pío  Papa  V. 

Amado  hijo,  noble  varón ,  salud  y  apostólica  bendición. 
Hemos  leído  cierta  carta  del  amado  hijo  el  maestre  del  hos- 
pital de  San  Juan  hierosolimitano,  en  la  cual  se  queja  no 
haber  podido  hacer  gente  en  Sicilia  por  defensión  de  la  isla 
de  Malta  contra  la  armada  del  turco  que  se  spera ,  ni  haberse 
podido  proveer  de  otras  cosas  necesarias  para  defenderse  de 
la  dicha  armada ,  cuyo  grande  peligro  sin  que  nosotros  ha- 
blemos ,  habla  de  sí  mismo  y  es  manifiesto  y  cuanto  sea  ne- 
cesario ayudar  al  dicho  maestre  de  todas  las  cosas  necesarias 
y  no  haber  lugar  de  alargar  el  tiempo  por  estar  ya  por  venir 
la  armada  turquesa  y  el  dicho  maestre  no  estar  apercibido. 
Por  esto  á  vuestra  nobleza  rogamos  mucho  que  en  tiempo 


485 

(le  lanía  necesidad  al  dicho  maestre  ayude  y  le  dé  con  toda 
la  presteza  posible  todas  las  cosas  necesarias  conforme  al 
mandato  ó  orden  de  S.  M.  ,  y  con  sus  cartas ,  avisos  y  cor- 
reos no  le  desampare,  á  efecto  que  viendo  el  dicho  maestre 
se  le  dan  las  cosas  prometidas,  se  encienda  él  y  toda  aquella 
religión  de  San  Juan  y  tomen  ánimo  para  resistir  valerosa- 
mente á  los  enemigos,  porque  con  vuestra  prudencia  bien 
podéis  entender  que  al  dicho  maestre  no  le  puede  suceder 
cosa  mala  ó  desgracia  alguna  que  no  sea  en  daño  irrepara- 
ble y  desgracia  de  toda  la  cristiandad  y  specialmente  del 
reino  de  Sicilia  y  de  toda  Italia.  Dada  en  San  Pedro  de  Roma 
á  22  de  marzo  de  1566  años,  primero  de  nuestro  ponti- 
ficado. 


Copia  de  minuta  de  contestación  de  D.  García  de  Toludo. 
ii  de  abril  de  1566. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
Santísimo  Padre  : 

He  rescibido  el  breve  de  V.  S.''  de  los  xxij  del  pasado 
en  viij  del  presente,  y  el  mandamiento  que  en  él  me  hace  so- 
bre los  gastadores  de  Malta  y  lo  demás  tendré  yo  por  ley 
muy  firme  en  cualquier  género  de  negocio  que  se  ofrezca  por 
grave  y  grande  que  sea,  porque  tal  orden  tengo  de  S.  M., 
y  cuando  se  ofrescerá  en  que  mandarme,  conoscerá  V.  S.** 
que  estas  palabras  serán  verdaderas  obras. 

V.  S.**  crea  que  de  las  cosas  de  xMalta  ha  tenido  y  tiene 
S.  M.  el  mismo  cuidado  que  podría  de  sus  mismos  reinos,  y 
por  los  subcesos  y  gastos  del  año  pasado  se  couosció  con  ma- 


180 

nifieslas  ser  eslo  ansí,  y  por  la  misma  causa  añadiéndose  á 
ella  que  no  se  perdiesen  tan  grandes  espesas  como  se  hicie- 
ron en  el  dicho  socorro ,  ni  se  dejase  caer  de  la  reputación 
que  en  él  se  ganó,  ha  mandado  S,  M.  que  en  este  presente 
año  se  haga  lo  mismo,  y  viendo  yo  este  mandamiento,  y  sa- 
biendo y  entendiendo  lo  que  importa  por  todos  respectos  so- 
correr aquella  isla,  no  habria  usado  de  tan  grande  descuido 
como  fuera  no  darle  los  gastadores  y  lo  demás  que  S.  M. 
mandaba,  y  si  de  mi  propia  hacienda  ofresci  al  maestre 
10  mil  ducados  para  que  comenzase  á  fortificarse,  no  es  de 
creer  que  en  el  dar  los  gastadores  hubiese  usado  ninguna 
pereza,  y  cuando  bien  no  conosciese  yo  la  importancia  de  la 
defensa  de  Malta,  ni  hubiese  trabajado  mi  parte  en  defen<- 
derla  una  vez ,  de  lo  cual  se  puede  creer  que  no  me  descui- 
darla la  segunda,  puede  V.  S.**  tener  por  ñrme,  que  por  no 
echarme  yo  á  las  espaldas  peso  tan  grande ,  ni  ponerme  so- 
bre ellas  culpas  y  descuidos  ajenos  si  los  ha  habido,  bastara 
para  ser  mas  diligente  en  dar  los  gastadores  si  se  me  hubie- 
ran demandado,  de  lo  que  paresce  por  la  información  que  á 
V.  S.**  han  hecho. 

De  palabra ,  Santísimo  Padre ,  persuadí  al  maestre  tres 
dias  después  de  partida  la  armada  de  aquella  isla,  que  metie- 
se luego  mano  á  la  labor,  y  le  ofresci  los  gastadores  que  qui- 
siese ;  y  como  torné  de  levante  á  los  26  de  octubre ,  screbí 
la  carta  que  V.  S.''  verá,  de  la  cual  envío  aquí  la  copia  y  la 
respuesta  que  á  ella  me  hizo.  Después  se  me  pidió  por  medio 
del  comendador  iMaldonado  á  los  xxij  de  noviembre  una  pa- 
tente para  poder  hacer  gastadores  en  Sicilia  y  se  la  di,  y 
quedaron  contentos  con  ella,  aunque  les  páresela  caro  el  pre- 
cio; certificando  á  V.  S/  que  al  mismo  se  pagan  ahora  los 
gastadores  para  la  Goleta,  dándoseles  tres  pagas  anticipadas, 
V  los  otros  eran  maestros  y  estos  laborantes.  Dada  esta  pa- 


487 

tente ,  nunca  mas  por  parte  del  maestre  se  me  pidió  un  gas- 
tador ni  un  hombre  para  la  fábrica  de  Malta.  Pero  dice  que 
no  halló  gente  con  ella,  y  esto  fuera  justo  que  me  lo  avisara 
y  escribiera  á  mí,  pues  me  tenia  mas  cerca.  Pero  V.  S/  ten- 
ga por  cierto  que  nunca  mas  se  me  pidió  un  hombre  como 
digo,  y  viendo  yo  esta  dilación  y  silencio,  y  habiendo  enten- 
dido de  algunos  particulares  que  el  maestre  decia  que  no  ha- 
bla hallado  gente  en  Sicilia ,  aunque  conosci  que  esto  se  rae 
habia  de  decir  á  mí  y  no  á  quien  no  lo  podia  remediar ,  y 
llegando  en  este  tiempo  Mos  de  Gio,  senescal,  y  otros  dos  ca- 
balleros de  parte  del  maestre  con  un  memorial  de  cosas  que 
pedían,  que  importaba  260  mil  ducados,  les  dije  á  ellos 
mismos  que  por  qué  no  me  habian  venido  á  decir  que  no  ha- 
llaban gente,  y  que  si  la  querian  que  los  mandaría  salir  por 
fuerza ,  como  paresce  por  la  respuesta  que  le  di ,  la  cual  va 
con  esta,  y  á  esta  oferta  nunca  mas  se  me  respondió,  y  que 
lo  mismo  hiciera  cuando  di  la  patente.  Pero  demás  de  no  pe- 
dírseme, es  bien  que  sepa  V.  S.**  que  en  este  reino  no  se  pue- 
de hacer  la  primera  vez  mandamiento  penal ,  lo  cual  se  pue- 
de á  la  segunda,  y  no  aquietándome  con  esto,  paresciéndo- 
me  que  la  obra  principal  de  la  montaña  de  San  Telmo,  que 
es  de  la  que  dependía  la  seguridad  de  aquella  isla ,  por  ha- 
berse dilatado  tanlos  meses  á  darle  principio,  corría  ya  peli- 
gro de  no  poderse  acabar  á  tiempo,  envié  al  conde  de  Vícary 
en  Malta  con  la  instrucción  que  V.  S.*^  mandará  ver,  el  cual 
alcanzó  en  Zaragoza  la  galera  que  llevaba  á  los  tres  caballe- 
ros que  el  maestre  me  habia  enviado ,  y  la  respuesta  que  trac 
va  también  con  esta.  Antes  que  llegase  el  conde  de  Vícary 
habia  rescibido  el  maestre  cartas  del  comendador  Boninsene 
enviado  por  él  al  Rey  nuestro  señor,  con  las  cuales  le  certifi- 
caba del  socorro  de  gente  y  dinero  que  daba  para  lo  de  allí, 
los  cuales  dineros  que  hacen  la  suma  de  50  mil  ducados,  es 


'188 

bien  que  sepa  V.  S.*^  que  los  diez  mil  de  victuallas  los  resci- 
bicron  cuando  me  los  enviaron  á  pedir,  y  los  diez  mil  de  mu- 
niciones, habiéndolas  mandado  hacer  en  Genova  y  Ñapóles, 
en  pólvora,  plomo  y  mecha,  como  V.  S/ puede  saber,  les 
ofrescí  de  meterla  en  Malta  con  estas  galeras  á  tiempo  que 
se  pudiese  servir  della ,  bien  que  por  esto  no  quedaba ,  por- 
que el  senescal  Mos  de  Gio  me  dijo  que  tenían  en  Malta  mas 
pólvora  de  la  que  tuvieron  el  año  pasado ;  y  porque  habiendo 
partido  agora  de  Mesina  recibí  una  carta  del  maestre  en  que 
me  decía  que  había  comenzado  la  nueva  ciudad ,  y  que  le  en- 
víase dinero  para  la  fábrica,  hallándome  fuera  de  lugar  para 
proveerlos ,  no  pude  dar  mas  de  siete  mil  ducados  que  traía 
conmigo  para  otros  gastos,  y  hoy  he  dado  orden  que  se  lleve 
allí  el  restante  de  los  xxx  mil ,  y  demás  desto ,  llegando  Ga- 
brio  Cervellon  en  Mesina,  le  envié  luego  á  Malta  para  que 
me  trújese  relación  del  estado  en  que  estaba  lo  de  allí ,  y  por 
la  que  ha  hecho  verá  V.  S.**  que  si  dende  el  mes  de  octubre 
se  comenzara  la  fábrica  del  monte  con  solos  400  laboradores, 
el  monte  se  pudiera  defender  con  menor  número  de  gente 
del  que  estaba  ofrescido  por  V.  S/  y  S.  M.  para  ello,  y  pues 
se  ha  comenzado  pocos  días  ha  la  obra  con  mil  y  200  hom- 
bres sin  traer  gente  forastera  de  ninguna  parte ,  bien  se  co- 
¡  noscia  que  no  dependía  la  dicha  fortificación  de  los  gastado- 
res de  Sicilia.  Al  comendador  mayor  he  dado  larga  cuenta 
destos  negocios ,  al  cual  suplico  á  V.  S.**  entienda  y  dé  cré- 
dito ansí  como  es  razón;  certificando  á  V.  S.*^  que  todo  lo  es- 
cripto  y  lo  que  él  dirá  de  mi  parte  es  la  pura  verdad ,  por- 
que demás  de  no  ser  de  mi  costumbre  alargarme  en  semejan- 
tes materias,  tendría  por  gravísimo  delicto  decir  á  tal  persona 
cosa  que  se  apartase  del  hecho.  Y  espánteme  mucho  que 
siendo  el  maestre  tan  honrado  haya  querido  desculparse  con 
echar  al  compañero  la  carga  que  no  le  toca  ni  puede  tocar. 


189 

Y  pues  me  he  remitido  en  lo  pasado  al  comendador  mayor, 
digo  que  también  de  lo  presente;  y  de  la  resolución  que  se 
ha  tomado  en  lo  de  Malta,  dará  larga  cuenta  á  V.  S.** ,  á  la 
cual  suplico  humilmente  perdone  el  fastidio  que  con  tan  lar- 
ga carta  le  he  dado,  y  el  que  dará  el  comendador  mayor 
con  lo  demás  que  en  esta  materia  hay  que  decir. 

Al  respaldo:  A  Su  Santidad  á  xj  de  abril,  en  respuesta 
del  breve  de  xxij  de  marzo. 


Carta  original  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo.  Madrid 
25  de  marzo  de  1566. 

Dice  que  si  el  gran  maestre  hubiese  desamparado  á  Malta ,  que 
envíe  con  tropa  suficiente  á  Ascanio  de  la  Corgna ;  y  que  para  evitar 
diferencias  entre  este  y  Ponipeyo  Colona,  que  manda  la  infantería 
del  papa,  ha  nombrado  al  marqués  de  Pescara  capitán  general  de 
toda  la  gente  que  allí  quedare— Pedro  Francisco  Doria. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Secilia :  Vuestras  cartas  de  ocho  y  diez  y 
seis  del  pasado  recibí  á  trece  del  presente,  por  las  cuales,  y 
la  que  el  maestre  y  religión  os  scribieron  á  veinte  y  ocho  de 
enero  y  las  otras  copias  y  relaciones  que  enviáis ,  he  visto 
particularmente  lo  que  de  vuestia  parte  les  propuso  y  refirió 
el  conde  de  Vicary,  así  en  lo  que  toca  á  la  fortificación  del 
monte  de  San  Telmo  como  en  lo  demás,  y  la  determinación 
con  que  todavía  estaba  de  salirse  de  Malta  dejando  algún  nú- 
mero de  gente  en  San  Ángel  y  el  dicho  castillo  de  San  Tel- 


190 

mo ,  reparándolos  y  forüficándolos  como  mejor  se  pudiese, 
pareciéndoles  que  venida  la  armada  del  turco  sobre  aquella 
isla  no  se  podrían  defender,  sino  con  tener  en  ella  los  doce 
mili  soldados  que  os  dijieron  el  dicho  conde  de  Vicary  y  los 
tres  comendadores  que  os  envió ,  por  todo  lo  cual  y  la  instan- 
cia que  con  el  dicho  maestre  habéis  hecho  y  lo  que  le  ofre- 
cistcs,  así  en  dinero  como  en  gastadores,  que  todo  ha  sido 
con  el  celo  y  voluntad  que  tenéis  al  servicio  de  Dios  y  nues- 
tro, os  lo  agradecemos  mucho,  y  tenemos  por  muy  cierto  y 
seguro  que  no  habrá  hecho  mudanza,  y  que  speraria  res- 
puesta de  lo  que  el  comendador  Maldonado  trujo ,  y  visto 
aquello  que  fué  con  el  correo  que  partió  á  los  tres  del  pre- 
sente, y  la  provisión  que  hicimos,  mandándole  dar  y  enviar 
tres  mili  spañoles  viejos  y  otros  tantos  alemanes ,  y  los  tres 
mili  de  Su  Santidad  y  otros  tantos  que  el  dicho  comendador 
dijo  recogería  y  juntaría  la  orden,  que  son  por  todos  doce  mili 
que  el  dicho  maestre  y  religión  pretenden ,  no  solo  se  habrán 
aquietado  y  sosegado ,  pero  con  razón  estarán  muy  conten- 
tos y  satisfechos ,  y  habrán  comenzado  la  fortificación  y  las 
otras  provisiones  y  cosas  necesarias  para  su  defensa  y  ofensa 
de  los  enemigos. 

Pero  si  por  caso  el  dicho  maestre  se  hubiese  anticipado 
á  salir  y  desamparar  aquella  isla ,  y  no  quisiese  volver  á  ella 
por  las  causas  que  scribís  ó  alguna  dellas,  que  no  es  de  creer 
ni  pensar,  pues  sabéis  la  importancia  della,  demás  déla  gente 
que  el  dicho  maestre  habrá  dejado ,  vos  proveeréis  de  la  que 
habéis  de  juntar  que  se  meta  dentro  la  que  viéredes  ser  ne- 
cesario para  su  seguridad  con  Ascanio  de  la  Gorna ,  que  por 
servirnos  no  lo  rehusará,  con  la  cual  y  los  tres  mil  soldados 
que  Su  Santidad  todavía  dará  y  continuará  siendo  para  este 
efecto,  aunque  el  dicho  maestre  se  hubiese  salido,  ó  saliese 
y  no  volviese,  estará  lo  de  allí  suficientemente  proveído. 


«91 

Y  por  si  todavía  Su  Santidad  revocase  lo  de  los  dichos 
tres  mil  soldados ,  por  prevenir  á  esto ,  ó  para  que  los  podáis 
traer  sobre  la  mar,  ó  para  otros  efectos  que  podrían  subce- 
der,  tenemos  por  bien  y  os  damos  comisión  que  podáis  ha- 
cer levantar  tres  mil  italianos  de  nuevo,  demás  de  los  cuatro 
mili  que  han  de  ir  á  la  Goleta ,  y  encargarlos  y  encomendar- 
los á  la  persona  que  os  parecerá  ser  mas  á  propósito,  miran- 
do que  no  se  reciban  al  sueldo  hasta  el  tiempo  que  será  ne- 
cesario ,  para  la  paga  de  los  cuales  proveeréis  del  dinero  de 
los  cient  y  veinte  y  cinco  mili  scudos  con  que  ese  reino  ha 
ayudado  y  socorrido  para  esta  presente  necesidad,  que  de 
acá  no  hay  forma  por  agora  de  poderse  hacer. 

Y  parece  que  aunque  el  dicho  maestre  se  saliese  de  la 
dicha  isla ,  los  cincuenta  mil  ducados  que  le  enviamos  á  ofre- 
cer no  se  le  pueden  dejar  de  dar,  specialmente  habiendo  de 
quedar  gente  en  las  dichas  dos  plazas,  con  que  los  emplee 
en  lo  que  se  ordenó ;  pero  terneís  la  mano  en  lo  de  la  forti- 
ficación ,  para  que  si  agora  no  se  pudiese  hacer  sirva  para 
lo  de  adelante,  y  que  se  provean  dellos,  de  las  vituallas  y 
municiones,  como  os  tenemos  scrípto. 

Mucho  os  agradezco  la  diligencia  que  ponéis  en  la  pro- 
visión de  las  vituallas,  que  no  dudo  sino  que  serán  tan  tra- 
bajosas y  dificultosas  de  hacer  y  juntar  como  apuntáis;  pero 
siendo  la  principal ,  y  en  que  tanto  va ,  no  puedo  dejar  de 
tornaros  á  encargar  tengáis  muy  particular  cuidado  dello, 
así  para  la  dicha  isla  de  Malta,  como  para  la  Goleta.  Y  pues 
en  lo  que  puede  haber  mas  embarazo  es  en  el  bizcocho ,  no 
pudiéndose  labrar  todo  lo  que  es  necesario  en  ese  reino  y  las 
otras  partes  donde  lo  habéis  ordenado ,  mirareis  sí  será  bien 
llevar  á  Malta  harina  ó  trigo,  para  que  allá  se  haga  pan  dello, 
y  proveerlo  heis  como  mejor  os  pareciere,  que  aunque  fué 
acertada  la  diligencia  que  hicisles  en  scríbir  á  la  señoría  de 


192 

Genova  prestasen  las  tres  mili  salmas  de  trigo  que  decís ,  y 
al  embajador  Figueroa  que  fuese  haciendo  bizcocho  dél ,  ha- 
nos  avisado  con  el  mismo  correo  que  tenia  por  cierto  no  ver- 
nian  en  ello ,  por  la  falta  que  tienen  de  grano  y  habérseles 
perdido  siete  ó  ocho  navios  cargados  dello ;  pero  todavía  le 
enviamos  á  mandar  lo  procure  con  instancia. 

He  visto  lo  que  scribís  sobre  lo  que  toca  al  llevar  y  con- 
ducir de  la  gente  para  h  Goleta,  y  la  orden  que  pensáis  dar 
en  esto ,  y  pues  por  el  último  despacho  y  la  instrucción  que 
llevó  el  prior  D.  Hernando,  de  que  se  os  envió  la  copia,  ha- 
bréis entendido  lo  que  cerca  deste  punto  habemos  proveído, 
no  hay  que  decir  sino  que  todavía  parece  que  aquello  es  lo 
que  mas  conviene,  y  lo  debéis  ejecutar  llegándoos  este  des- 
pacho á  tiempo ,  pues  si  pusiesen  allí  menos  de  ocho  mili 
hombres  de  un  golpe ,  no  solamente  podrían  fortificarse  en- 
tretanto que  llegaba  la  otra  gente ,  ni  serian  parte  para  cor- 
tar ni  tomar  la  leña  y  fajina ,  pero  estando  el  Rey  de  Túnez 
con  la  voluntad  que  tenéis  entendido,  podría  subceder  algún 
inconviniente  notable,  en  especial  si  no  fuesen  con  bastante 
provisión  de  bastimentos.  Y  en  cuanto  al  sitio  ya  os  tenemos 
remitido  á  vos  y  al  dicho  prior,  que  comunicándolo  con  don 
Alonso  Pimentel  y  las  otras  personas  pláticas  y  de  experien- 
cia que  se  hallaren  allí,  elijáis  y  hagáis  lo  que  viéredes  con- 
venir para  la  defensa  y  seguridad  de  aquella  plaza,  y  lo  mis- 
mo hacemos  agora ,  con  lo  cual  se  satisface  á  la  duda  que 
en  esto  ponéis. 

Pues  en  ese  reino  y  Ñapóles  se  habrán  á  mejor  prescio  las 
vituallas  para  la  embarcación  de  los  españoles  que  se  sacan 
á  Lombardía,  y  alemanes  que  han  de  ir  á  la  dicha  Goleta  y 
Malla ,  6  italianos  que  se  levantan ,  parece  muy  bien  que  se 
traigan  de  allá  en  las  galeras ,  y  que  toméis  los  treinta  y  un 
mili  escudos  que  para  este  efecto  enviamos  al  dicho  embaja- 


193 

(lor  Figaeroa ,  y  paguéis  dellos  lo  que  hubieren  montado ,  y 
lo  que  sobrare  se  distribuya  en  las  otras  cosas  necesarias,  y 
así  scribo  al  dicho  embajador  que  os  los  haga  entregar,  según 
veréis  por  la  copia  de  su  carta.  Y  está  bien  haber  diputado 
y  nombrado  el  tesorero  particular  que  decís  en  cuyo  poder 
entre  este  dinero  y  lo  demás  que  para  estas  cosas  proveyó - 
remos ,  y  que  no  se  mezcle  con  otros  gastos ,  sino  que  con 
intervención  del  maestro  racional  dése  reino  atienda  á  ello  y 
tengan  la  cuenta  particular  de  lo  que  se  gastare  para  que  se 
nos  vaya  enviando  á  sus  tiempos. 

La  determinación  que  teniades  de  venir  en  las  galeras 

para  el  trafagar  y  conducir  de  la  dicha  gente  y  vituallas,  me 

ha  parecido  muy  acertada  y  conviniente ,  pues  con  vuestra 

presencia  se  porná  en  lodo  mayor  diligencia,  y  así  lo  fué 

prevenir  y  avisar  al  duque  de  Alburquerque  para  el  tiempo 

que  ha  de  tener  los  spañoles  en  el  Specia ,  y  que  para  el 

mismo  procurase  que  estuviesen  allí  juntamente  los  italianos. 

Y  el  virey  de  Ñapóles  nos  escribe  hará  de  la  gente  de  aquel 

reino  lo  que  le  enviáis  á  pedir,  excepto  que  reterná  solamente 

dos  compañías  para  que  queden  la  una  en  Gaeta  y  otra  en 

Ñapóles,  por  ser  de  tanta  importancia  aquellas  plazas ;  y  le 

enviamos  á  mandar  que  os  dé  toda  la  gente  que  tuviere,  sin 

dejar  estas  compañías  ni  otra  ninguna  porque  asi  conviene; 

pero  será  menester  que  se  haga  cuando  los  alemanes  estén 

en  el  reino,  porque  puedan  quedar  proveídas  las  dichas  dos 

plazas.  Y  cuanto  á  los  dos  mili  alemanes  de  los  tres  que  han 

de  venir  á  aquel  reino,  que  se  han  de  sacar  á  cumplimiento 

de  los  diez  mili ,  por  agora  no  se  scribe  esto  al  dicho  virey, 

pero  hacerse  ha  á  su  tiempo. 

En  lo  que  toca  á  los  quince  buquas  que  habíades  de  ha- 
cer en  ese  reino,  pues  scribís  que  la  madera  del  no  es  buena, 
y  que  si  se  hubiese  de  traer  de  Ñapóles  y  pagar  los  derechos 
T0.M0  XXX.  15 


194 

que  allí  se  deben ,  saldrían  muy  caros ,  scñbimos  por  este 
respecto  al  dicho  virey  de  Ñapóles  que  las  haga  labrar  y  ha- 
cer allí  por  ser  mas  á  propósito ;  pero  será  menester  que  le 
proveáis  y  enviéis  el  dinero  necesario  porque  no  terna  forma 
para  podellos  labrar  de  otra  manera. 

La  orden  que  distes  para  que  no  se  levantasen  los  reme- 
ros de  buena  boya  para  esta  presente  necesidad,  nos  ha  pa- 
recido bien,  por  ser,  como  serian,  de  tan  poco  fruto  y  tanto 
gasto ;  y  á  los  visoreyes  de  Ñapóles  y  Cataluña  y  á  D.  Alvaro 
de  Bazan  enviamos  á  mandar  que  así  lo  hagan. 

En  lo  de  Pedro  Francisco  Doria ,  visto  que  decís  ser  tan 
útil  para  lo  de  la  mar  y  tierra ,  tenemos  por  bien  que  resi- 
diendo y  sirviendo  cerca  de  vuestra  persona  en  mar  ó  en 
tierra ,  según  de  nuestra  parte  se  lo  ordenáredes ,  se  le  den 
en  catla  mes  cient  y  cincuenta  sendos  de  entretenimiento  por 
el  tiempo  que  fuere  nuestra  voluntad ,  ó  hasta  tanto  que  le 
hagamos  otra  merced  equivalente ,  y  vos  le  podréis  avisar 
de  ello. 

Y  cuanto  á  las  dos  galeras  de  Cabrio  Cervellon ,  yo  tengo 
por  bien  de  mandárselas  comprar  y  consignar  lo  que  mon- 
taren en  renta  en  el  reino  de  Ñapóles ,  porque  de  contado  no 
se  podría  hacer,  y  así  os  damos  comisión  para  que  las  ha- 
gáis tasar  y  apreciar  con  intervención  de  nuestros  oficiales; 
y  los  sclavos  y  forzados ,  buques ,  artillería ,  jarcias  y  lo  de- 
más que  tuviere  que  se  deba  comprar,  mirando  que  por  los 
condenados  de  nuestros  estados  no  se  le  ha  de  dar  ninguna 
cosa  i  y  que  si  hubiere  algunos  franceses  en  ellas ,  tomados 
en  las  guerras  pasadas  desde  el  año  de  quinientos  y  cin- 
cuenta y  uno  ó  en  otra  manera ,  se  han  de  restituir ,  excepto 
tan  solamente  los  que  por  delitos  fueren  condenados,  que 
estos  han  de  cumplir  sus  sentencias  y  dárseles  después  liber- 
tad; y  hecho  esto  nos  enviareis  la  relación  de  lo  que  monta- 


195 

ren ,  para  que  vista ,  se  haga  el  despacho  necesario  y  se  es- 
criba sobrello  al  dicho  virey  de  Ñapóles;  y  efectuado,  las 
traeréis  juntamente  con  las  otras  que  tenéis  á  vuestro  cargo, 
proveyéndolas  por  aquel  mismo  camino. 

En  lo  del  conde  de  Altamira  parece  que  por  agora  no  se 
debe  de  hacer  novedad ,  y  en  lo  que  se  ofreciere  yo  temé  me- 
moria de  lo  que  nos  ha  servido  y  sirviere. 

Cuanto  á  lo  del  dinero,  visto  que  necesariamente  habéis 
de  tomar  á  nuestro  sueldo  navios  de  alto  borde  y  hacer  otras 
provisiones ,  se  queda  tratando  y  platicando  de  hacer  un  cam- 
bio de  cient  mili  ducados,  y  en  concluyendo  se  os  despacha- 
rá correo. 

Y  para  que  vayan  y  vengan  con  mas  brevedad  los  avi- 
sos que  tuviéredes  de  la  armada  del  turco,  y  se  sepa  lo  que 
allá  hiciéredes  y  acá  se  proveyere,  envío  á  mandar  al  virey 
de  Cataluña  que  tenga  armados  y  á  punto  tres  buenos  ber- 
gantines :  vos  haréis  allá  lo  mismo ,  ordenando  que  traigan 
los  despachos  á  punto  para  que  subcediendo  algo  en  la  mar 
los  puedan  echar  en  ella. 

Y  en  lo  que  toca  á  los  cient  y  veinte  y  cinco  mili  scudos 
que  scribís  que  ese  reino  ha  otorgado,  aunque  somos  cierto 
lo  ha  hecho  de  tan  buena  voluntad  y  como  tan  buenos  subdi- 
tos y  vasallos  nuestros ,  todavía  os  agradecemos  la  industria 
y  diligencia  que  en  ello  habéis  puesto. 

Y  porque  como  apuntáis  saliendo  el  dicho  maestre ,  y  ha- 
biendo de  entrar  en  la  dicha  isla  el  dicho  Ascanio  y  Pompeo 
Colona ,  á  quien  Su  Santidad  envía  con  los  dichos  tres  mili 
soldados,  podria  haber  diferencias  y  ofrecerse  muchas  dificul- 
tades sobre  el  gobierno  y  otras  cosas,  nos  ha  parecido  elegir 
y  nombrar  por  capitán  general  de  la  gente  que  quedase  en 
la  dicha  isla  al  marqués  de  Pescara ,  por  ser  la  persona  que 
es ,  y  la  speriencia  que  tiene ,  y  á  quien  con  razón  deben  to- 


i96 

dos  obedecer ;  y  habiendo  de  subceder  eslo,  yo  soy  cierto  que 
Su  Santidad  y  el  dicho  gran  maestre  serán  contentos  dello  y 
lo  teman  así  por  bien ,  porque  no  haya  sino  una  cabeza  que 
gobierne,  pues  lo  demás  trairia  notables  y  evidentes  incon- 
venientes para  la  seguridad  de  la  isla  y  lo  que  en  ella  se  po- 
dría ofrecer,  y  quedando  en  ella  el  dicho  maestre  como  lo 
tenemos  por  cierto,  también  es  nuestra  voluntad  que  sea  ca- 
pitán general  de  los  seis  mili  infantes  que  enviamos  á  nues- 
tro sueldo,  el  cual  obedecerá  y  acatará  al  dicho  gran  maes- 
tre, como  es  razón  y  se  lo  habernos  ordenado;  y  tenemos  por 
muy  cierto  que  él  le  comunicará  y  tratará  lo  que  se  ofreciere, 
y  usará  de  su  persona  como  los  méritos  y  calidad  della  lo  me- 
recen. Y  el  dicho  marqués  partirá  de  aquí  con  toda  brevedad, 
y  llevará  los  despachos  necesarios  á  este  propósito ,  y  está 
prevenido  que  aquí  ni  allá  hasía  su  tiempo  no  publique  nin- 
guna cosa,  mas  de  que  va  con  el  dicho  cargo  para  estar  de- 
bajo del  maestre ,  porque  no  parezca  que  se  duda  en  su  que- 
dada en  Malta.  De  Madrid  á  xxv  de  marzo  de  mdlxvi  años. 
— Yo  el  Rey. — Francisco  de  Eraso. 

Sobre.  — Al  lile.  D.  García  de  Toledo ,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar  y  virey  de  Secilia. 

Capitulo  de   carta  original  del  secretario  Francisco  de 
Eraso  á  D.  García  de  Toledo  de  25  de  marzo  de  i 506. 

f Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Lo  de  Pedro  Francisco  Doria  ha  tenido  por  bien  S.  M.,* 
y  que  se  le  dé  el  mismo  entretenimiento  que  V.  S.  scribió. 
Y  yo  veo  bien  cuanto  es  menester  que  trayendo  V.  S.  tanta 
máquina  á  cuestas  le  dé  S.  M.  hombres  que  le  ayuden  y  des- 
carguen; y  asi  hice  en  esta  conformidad  el  oficio  necesario. 


197 

Copia  de  carta  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M.  25  de  ' 
marzo  de  1566. 

Le  remite  una  relación  de  Gabrio  Cervellon  sobre  el  estado  de 
las  fortificaciones  de  Malta. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

S.  C.  R.  M. 

A  los  xvj  escrebi  á  V.  M.  largo  lo  que  hasta  estonces 
ocurrió,  y  dije  como  habia  enviado  á  Gabrio  Cervellon  á 
Malta  coa  una  galera  á  ver  si  lo  de  allí  tenia  algún  remiendo 
con  que  se  pudiese  remediar  el  descuido  de  no  haber  puesto 
mano  en  la  obra.  Lo  que  refiere  verá  Y.  M.  por  la  misma  re- 
lación que  va  con  esta.  Afirma  que  si  dende  el  mes  de  octu- 
bre se  hubiese  labrado  con  solos  400  hombres  el  monte  de 
San  Telmo  estarla  en  el  término  que  se  desea  para  ser  de- 
fendido con  menor  número  de  gente.  Dentro  de  dos  dias  que 
llegó  Gabrio  vino  Ascanio  de  la  Corna,  y  confiriendo  todos 
tres  este  negocio,  no  hallamos  manera  ni  lugar  para  poner 
la  gente  designada  sin  manifiesto  peUgro  de  perderse,  y 
aunque  Ascanio  dice  que  en  caso  que  no  se  hubiesen  de  po- 
ner en  la  Goleta  los  xij  mil  hombres  y  se  pusiesen  en  Malta, 
que  con  ellos  y  con  los  que  allí  hablan  de  entrar  que  serian 
al  número  de  20  ó  21  mil  infantes,  seria  bastante  á  comba- 
tir con  los  enemigos  en  campaña ,  yo  lo  tengo  por  dificul- 
toso, porque  aunque  el  valor  de  los  nuestros  pudiese  suplir 
al  mayor  número  de  los  enemigos,  no  sé  si  son  de  tener  en 
tan  poco,  que  con  doblado  número  que  los  nuestros  se  pueda 
tener  la  victoria  por  tan  cierta ,  tanto  mas  que  con  gran  fa- 
cilidad podrían  con  su  misma  armada  traer  de  Berbería,  que 


198 

está  bien  cerca ,  grueso  golpe  de  caballería  en  su  favor.  Ten- 
go bien  por  cierto  que  si  el  número  de  gente  que  dice  Asca- 
nio  pudiese  alojar  en  la  montaña  de  San  Telmo  y  tuviese  allí 
que  beber ,  que  aunque  en  la  fábrica  de  dicha  montaña  no 
se  haya  hecho  nada ,  que  solo  el  sitio  baslaria  para  hacer  á 
los  nuestros  superiores  de  fuerzas ,  aunque  menores  en  cuan- 
tidad; pero  esta  agua  no  la  hay  en  la  montaña  para  tal 
golpe  de  gente,  aunque  estuviesen  llenas  las  cinco  cisternas 
que  Cabrio  dice  estar  casi  vacías ,  y  aunque  estuviesen  lim- 
pias y  con  agua  las  seis  que  de  nuevo  se  han  hallado  en  el 
dicho  monte ,  de  manera  que  por  esta  causa  seria  forzada 
nuestra  gente  de  dejar  la  montaña  y  calarse  al  alojamiento  del 
agua  que  es  en  la  Marza ,  y  si  estuviese  la  Marza  tan  cerca 
de  la  montaña  de  San  Telmo  que  pudiese  ser  guardada  con 
la  frente  de  nuestra  gente,  y  el  medio  y  la  cola  de  este  alo- 
jamiento pudiese  extenderse  á  señorear  la  montaña  de  San 
Telmo,  aun  seria  cosa  platicable;  pero  es  de  manera  apar- 
tada que  no  se  puede  encerrar  el  monte  y  el  agua  como 
convernía,  y  si  por  caso  nos  quisiésemos  retirar  algo  con  la 
frente  de  nuestro  alojamiento  hacia  la  montaña  para  ase-* 
gurar  á  lo  menos  de  dia  el  agua,  si  de  noche  los  enemigos 
pudiesen  tener  parte  en  ella ,  seria  fácil  atosigalla  y  hacerla 
inútil  para  nosotros,  y  si  del  lodo  nos  quisiésemos  llegar  á 
ella,  hacerse  hian  los  enemigos  señores  de  la  montaña  de  San 
Telmo ,  y  tendrían  de  su  parte  el  sitio  y  el  número  mayor  y 
comodidad  en  él  para  hacer  frente  bastante  á  defenderse  de 
los  nuestros ,  y  con  su  retaguardia  combatir  el  castillo  viejo 
de  San  Telmo,  en  el  cual  no  habrá  defensa  ninguna  por  nías 
que  lo  remienden ,  los  cuales  enemigos  tendrán  con  que  be- 
ber aunque  alojen  en  la  montaña  de  San  Telmo ,  porque  aun- 
que el  castillo  esté  en  pié ,  de  noche  pueden  entrar  por  la 
boca  del  puerto  con  la  cuantidad  de  barcas  que  tendrán ,  y 


i99 

descargar  al  pié  de  su  alojamiento  toda  el  agua  y  victualla 
que  quisieren  y  tornarse  á  salir  antes  del  dia  á  su  salvo ,  y 
estas  barcas  ya  las  raetian  y  sacaban  por  el  puerto  de  la  ma- 
nera dicha  el  año  pasado  antes  que  se  perdiese  San  Telmo, 
sin  que  él  se  lo  pudiese  impidir.  Si  los  nuestros  pudiesen 
como  he  dicho  al  principio  tener  la  montaña ,  no  pueden  ser 
tomados  por  hambre ,  porque  dende  ella  echan  la  armada  de 
los  enemigos  de  todos  los  puertos,  y  viéndose  venir  el  in- 
vierno encima ,  y  en  parte  mal  segura  para  su  armada ,  está 
claro  que  no  pueden  hacer  designo  de  tomar  á  los  nuestros 
por  hambre  aunque  no  tengan  vitualla  sino  por  seis  meses; 
pero  si  tienen  los  puertos,  está  manifiesta  por  este  camino 
la  perdición  de  los  nuestros,  y  esto  mismo  se  puede  te- 
mer en  la  gente  de  la  Goleta,  teniendo  los  enemigos  tan 
cerca  della  á  puerto  Fariña  donde  tienen  segura  su  armada 
y  el  poderla  sitiar ,  porque  en  verano  ya  he  dicho  que  es 
muy  peligroso  el  aventurar  naves  para  tal  efecto ,  y  en  in- 
vierno que  habria  en  esto  mas  seguridad,  la  natura  del  golfo 
es  de  manera  que  aunque  se  vaya  con  los  vientos  frescos  en 
popa,  como  se  llega  á  diez  ó  doce  millas,  saltan  los  vientos 
de  la  tierra  que  dan  harto  trabajo  á  cualquier  bajel  aunque 
sea  de  remos  para  poder  entrar,  y  con  esto  se  junta  el  poco 
fondo  para  navios  grandes,  y  si  son  pequeños  la  poca  carga 
que  pueden  llevar,  y  estas  dificultades  como  tocan  no  solo 
en  marinería  sino  en  la  plática  della  y  del  mismo  lugar,  está 
visto  que  no  se  puede  tener  allá  del  todo  noticia  deltas ,  y 
aunque  la  nave  pudiese  estar  á  tiro  de  cañón  de  la  Goleta, 
no  por  eso  dejará  la  armada  de  los  enemigos  de  sacarla  ó 
de  quemarla ,  pues  para  tenerla  en  bajo  de  los  muros  no  lo 
consiente  el  fondo  como  digo.  Tornando  á  lo  de  Malta  por- 
que se  cumpla  el  mandamiento  de  V.  M.  se  partió  Ascanio 
anoche  en  las  galeras  de  la  religión  que  se  hallaban  aquí 


200 

para  irse  á  presentar  al  maestre  y  mostrar  que  por  él  no 
queda  de  cumplir  lo  que  se  le  ha  mandado.  Verá  también 
los  sitios  de  Malta  y  si  habrá  forma  para  hacerse  con  el  nú- 
mero ya  dicho  de  los  20  mil  hombres  señor  del  sitio  de  San 
Telmoy  del  agua  de  la  Marza,  y  con  la  resolución  que  con- 
viene para  ver  si  lleva  plática  lo  que  está  ordenado  de  me- 
ter los  6  mil  hombres  de  Su  Santidad  y  de  V.  M.  con  los 
tres  mil  del  maestre ,  aunque  me  dicen  que  si  bien  están 
nombrados  tres,  no  serán  sino  dos  mil. 

Con  la  relación  de  lo  uno  y  de  lo  otro  vendrá  á  Trápana 
ó  á  la  Goleta  á  buscarme,  y  en  este  medio  espero  tener  res- 
puesta del  despacho  de  dos  y  16  del  pasado,  y  entretanto  se 
da  gran  priesa  en  lo  de  la  vitualla,  en  la  cual  aunque  no  lo 
puedo  afirmar  pienso  dar  buen  recaudo ,  y  lo  mismo  en  lo 
de  la  Goleta  si  aquello  se  hubiese  de  llevar  adelante,  y  en 
todo  lo  demás  tocante  á  este  reino  de  Sicilia,  como  V.  M. 
habrá  mas  largaFnente  visto  por  el  memorial  que  le  envié  á 
los  dos  del  pasado.  En  este  medio  que  Ascanio  hace  su  na- 
vegación ,  me  parto  yo  en  esta  hora  con  todas  las  galeras 
que  aquí  tengo,  y  cargaré  en  ellas  todo  lo  que  se  pudiere 
para  llevarlo  á  la  Goleta,  y  otras  muchas  cosas  que  no  pue- 
den ir  en  ellas  están  cargadas  en  dos  ó  tres  naves,  á  las  cua- 
les se  dará  la  orden  que  conviene  para  el  dicho  efecto ,  y  he 
enviado  cinco  al  visorey  de  Ñapóles ,  porque  me  ha  escripto 
que  tenia  falta  dellas,  y  los  tiempos  han  desayudado  mucho 
que  han  sido  tales,  que  haciendo  once  dias  que  envié  de  aquí 
las  galeras ,  ansí  para  que  cargasen  lo  que  agora  han  de  lo- 
mar ,  como  para  que  asegurasen  en  las  islas  de  la  Favignana 
los  navios  que  de  aquí  y  Ñapóles  van  á  la  Goleta,  volvieron 
con  tal  temporal ,  que  pensé  haber  perdido  la  meilad  dellas, 
y  una  que  se  desaferró  la  tu\e  por  perdida  hasta  que  de  ahí 
á  tres  dias  la  recobré  que  habia  aferrado  á  Lipar,  y  estos 


201 

tiempos  creo  también  que  son  causa  de  no  haber  dejado  par- 
tir á  D.  Sancho.  V.  M.  crea  cierto  que  se  fuerza  la  natura 
cuando  se  sacan  estos  navios  antes  de  tiempo  fuera  de  sus 
casas  y  tanto  mas  en  estos  ,  porque  del  tiempo  que  yo  nave- 
gaba al  de  agora  hay  tanta  diferencia,  que  estonces  se  hacia 
este  arte  con  maestros  y  agora  se  hace  con  muy  ruines  dis- 
cípulos ,  y  para  suplir  esta  falta  no  hay  sino  un  solo  remedio, 
y  este  es  navegar  en  meses  menos  peligrosos,  y  forzando  las 
ocasiones  á  hacer  lo  contrario,  V.  M.  puede  considerar  en 
el  peligro  que  traigo  su  armada,  que  es  tan  grande  que  no 
me  espanto  de  que  me  tiemblen  los  brazos,  mas  de  como  no 
lo  hace  lodo  el  cuerpo. 

Viendo  que  D.  Sancho  no  viene ,  me  ha  parescido  no  es- 
perarle mas,  y  porque  aventaje  camino  le  he  dado  orden 
que  vaya  derecho  á  Palermo  con  sus  galeras,  y  he  tomado 
en  las  mias  la  carga  que  de  aquí  le  podia  tocar  por  ganar 
tiempo,  y  hasta  encontrarle  iré  harto  embarazado.  A  las 
naves  que  hallare  en  la  dicha  Goleta  y  á  las  que  de  nuevo 
van,  daré  orden,  visto  lo  de  allí,  si  ansí  conviniere  al  ser- 
vicio de  V.  M. ,  que  vuelvan  entretanto  que  yo  paso  á  Ge- 
nova todas  juntas  á  cargar  los  bizcochos  que  serán  40  mil 
quintales  peso  de  España ,  entre  los  cuales  habrá  cuatro  mil 
en  harinas ,  de  manera  que  ellos  con  la  vitualla  y  yo  con  la 
gente  podríamos  ser  todos  á  un  tiempo.  Y  porque  desde  la 
Goleta  á  Cerdeña  no  hay  sino  ciento  y  setenta  millas,  quizá 
dejaré  en  aquella  isla  tanta  parte  de  galeras  cuanta  baste  á 
embarcar  la  infantería  que  hay  en  ella ,  dándoles  orden  que 
vuelvan  hacia  la  Goleta  con  la  dicha  gente  y  anden  haciendo 
escolla  á  estas  naves  que  han  de  ir  y  venir;  y  si  me  pare- 
ciere lo  contrario  guiarlo  he  como  mas  convendrá  al  servicio 
de  V.  M.  A  la  pasada  de  Cerdeña  se  tomarán  también  los 
bizcochos  y  carnes  saladas  que  allí  he  mandado  hacer,  y  ven- 


202 

do  de  acá  proveído  de  vinos  y  de  pescado ,  servirá  esta  pro- 
visión para  el  victo  de  los  soldados  que  he  de  embarcar,  por- 
que ya  escribí  que  era  esto  mas  barato  que  mandar  hacer  la 
provisión  en  Genova ,  y  con  haberme  scripto  la  señoría  que  no 
podía  hacer  allí  bizcochos  si  no  llevaba  trigo ,  llevaré  en  las 
galeras  hasta  30  mil  hanegas ,  porque  aunque  este  bizcocho 
será  fuera  de  tiempo,  sírveme  desta  ocasión  porque  se  ganará 
en  ello  mas  de  14  ó  16  mil  ducados,  que  no  harán  daño  para 
proveerme  allí  de  otras  cosas  necesarias.  Piénseme  volver 
dende  Genova  por  Civitavieja  para  embarcar  la  gente  del 
papa  si  en  este  medio  no  hubiere  cosa  que  lo  estorbe ,  y  por 
Ñapóles  para  tomar  el  resto  de  las  vituallas  que  allí  hubiere, 
y  de  allí  atravesar  á  la  Goleta  y  á  Malta  dividiendo  las  gale- 
ras con  la  gente  que  á  cada  parte  hubiere  de  acudir,  no 
obstante  que  ya  tengo  scripto  á  V.  M.  que  si  en  Malta  no 
hay  fortificación  en  bajo  de  que  meterse ,  que  no  es  bien  po- 
ner aquella  gente  al  cuchillo.  Pero  pues  antes  que  se  pue- 
da poner,  podré  tener  respuesta  de  V.  M.,  ansí  en  esto 
como  en  lo  de  la  Goleta ,  no  tendré  mas  que  decir  sino  que 
la  espero  con  grandes  deseos.  Nuevas  de  la  armada  del  tur- 
co no  las  tengo  mas  frescas  de  las  de  14  de  hebrero  que 
envié  á  V.  M.  El  duplicado  dellas  y  de  aquel  despacho  irá  con 
esta. 

El  Fralin  ingeniero  llegó  aquí  á  los  xviij  del  presente ,  y 
aunque  dos  días  antes  tenia  yo  ya  cartas  del  embajador  de 
Genova  de  lo  que  había  acaescido  á  los  gastadores  que  de  allí 
se  enviaron  á  la  Goleta ,  me  mostró  él  otras  cartas  en  que 
me  lo  confirmaba.  Háme  pedido  que  demás  de  lo  que  á  mí 
me  tocaba  enviar  á  la  Goleta ,  le  diese  otros  150  gastadores 
y  40  muradores.  Helos  luego  mandado  hacer ,  y  aunque  es 
en  recio  tiempo  por  causa  de  la  recolta ,  procuraré  de  que 
por  esta  via  ó  por  olra  los  gastadores  no  fallen.  Y  V.  M. 


203 

esté  descansado ,  que  cualquiera  cosa  que  haya  fallado  de  las 
otras  partes  se  suplirá  de  aquí  cumplidamente. 

Ya  escrebí  á  V.  M.  como  el  maestre  me  había  enviado 
aquí  el  comendador  Burgués  con  el  memorial  que  envié  con 
el  pasado  y  con  la  respuesta  que  á  él  hice ,  y  porque  no  pu- 
diese decir  que  se  le  daban  palabras,  le  di  luego  los  x  mil 
escudos  de  la  vitualla ,  no  obstante  que  no  han  venido  los  20 
mil  escudos  que  el  embajador  de  Genova  había  de  remitir 
para  esto  por  cédulas  de  cambio  para  que  él  la  comprase  á 
su  voluntad,  y  licencia  para  poderlo  sacar  del  reino  sin  nin- 
gún derecho,  como  se  verá  por  la  póliza  que  él  hace,  fir- 
mada de  su  mano,  la  cual  escribo  al  comendador  mayor  que 
la  envíe  á  V.  M.  por  habérsela  yo  enviado  á  él,  porque  Roma 
es  lugar  á  donde  algunas  veces  vienen  á  propósito  estas  cau- 
telas. Este  dinero  se  lo  di  con  hacerme  dar  aquí  fianzas,  que 
si  V.  M. ,  saliéndose  la  religión  de  allí,  no  tuviese  por  bien 
dado  este  dinero ,  sean  obligados  á  tornarlo ;  y  en  los  x  mil 
que  les  he  de  dar  de  municiones ,  pues  he  tocado  este  punto 
en  mis  despachos  pasados ,  también  espero  tener  respuesta 
dellos,  y  heme  obligado  á  la  vuelta  de  Genova  de  consignar- 
les tantas  que  lleguen  al  valor  de  los  diez  mil.  Y  todo  lo  que 
se  ha  hecho  y  se  hace  es  con  un  trabajo  increíble ,  porque 
con  ofrescer  el  quince  por  ciento,  como  se  concedió  en  el 
parlamento,  no  puedo  hallar  un  real  sobre  los  100  mil  du- 
cados ;  pero  hacerse  ha  de  manera  que  aunque  esto  sea  fas- 
tidio no  sea  estorbo  para  lo  que  se  ha  de  hacer,  y  aunque 
por  cambios  se  hubiesen  remitido  los  dineros  que  hay  en  Ge- 
nova, hay  aquí  tanta  estrecheza  de  dinero  y  las  bolsas  tan 
flacas  que  creo  que  hubiera  sucedido  algún  inconveniente 
notable,  porque  andan  mucho  destos  mercaderes  muy  acos- 
tumbrados á  romper  por  menores  causas. 

Dende  Genova,  á  donde  se  lomará  la  última  cuenta  de 


20i 

los  dineros  de  Portillo  y  de  los  gastos  del  año  pasado,  se 
dará  la  entera  noticia  que  V.  M.  demanda  dellos.  De  allí 
se  enviará  la  relación  de  todo  el  gasto  que  han  hecho  las 
galeras  de  mi  cargo  por  todo  este  presente  mes  de  marzo,  y 
entonces  escrebiré  sobre  este  punto  lo  que  me  ocurre  que 
decir;  y  V.  M.  tenga  por  cierto  que  no  ha  sido  culpa  mia  no 
haber  ido  hasta  agora,  y  no  es  de  los  menores  fastidios  que 
he  tenido  el  de  procurar  de  sacar  estas  cuentas  en  limpio. 

He  escripto  á  V.  M.  otras  veces  que  conviene  á  su  ser- 
vicio que  todas  las  galeras  sean  suyas,  y  demás  de  lo  que 
toca  al  estado  digo  costarán  mucho  menos  de  lo  que  hoy  dia 
cuestan,  y  á  esto  yo  me  obligo.  Si  quisiere  V.  M.  remitirme 
la  compra  de  las  de  Adán  Centurión  y  de  las  cuatro  de  los' 
Lomelines,  mande  V.  M.  pagar  allá  la  meitad  que  yo  pro- 
curaré de  pagar  acá  la  otra  meitad ,  porque  el  año  va  tal  que 
espero  sin  falta  poder  sacar  de  las  tratas  tanto  que  pueda 
entrar  esta  partida  en  lo  que  avanzare;  y  si  se  espera  á  ha- 
cer esta  compra  toda  junta,  nunca  habrá  dineros  para  ella. 
De  lo  que  se  ha  hecho  en  las  de  Juan  Andrea ,  aunque  me 
escriben  que  está  ya  despachado ,  no  tengo  aviso ,  que  lo 
estoy  por  esta  misma  causa  esperando  con  deseo.  Suplico 
á  V.  M.  que  mande  se  cumpla  lo  que  han  de  haber  las  de 
Florencia ,  porque  yo  lo  pago  acá  cada  dia  con  lo  que  el  prín- 
cipe me  lo  solicita. 


205 


íiíüfófj 


Relazione  di  Cabrio  Cervclloni  all 

Relación  citada  en  )  ^'^'"^-  ^r.  D.  Garzia  de  Toledo,  fal^ 
la  carta  anterior.         \  ie  sopra  la  cosa  di  Malla  all  i  xvij  di 
marzo  di  1566. 


(Archivo  general  de  Simancas.— Estado,  legajo  núm.  1130;  ^ 


í.ii 


Visto  et  considéralo  quel  che  al  lempo  presente  si  po- 
tesse  far  per  difensione  del  luogo  del  Borgo  et  S.  Michele, 
dico  che  le  ruine  loro  sonó  di  sorle ,  che  ci  vorria  maggior 
lempo  a  repararle ,  et  non  dimeno  patirebbono  il  mcdessimo 
danno  essendose  male  intesa  quella  fortificazione.  , 

Circa  il  sito  sopra  essi  due  luoghi  detto  Santa  Margarita 
io  lo  truovo  difficile,  che  oltre  che  circonda  da  1500  canne 
resta  in  molle  partí  se  non  in  tullo  domínalo  al  parí,  essendo 
quelli  poggí  vicini  Tuno  all  allro  di  poca  alteza ,  et  come 
piani ,  che  l'ínimco  ha  commodilá  di  metlervi  ogní  quantilá 
de  artegliaria  che  volesse. 

Ho  visto  tullí  quelli  ramí  di  scoglí,  che  fanno  lí  due  porli, 
quali  tullí  patíscono  molle  contraríela ,  cosí  il  piano  della 
Marza,  íl  quale  volendoglí  far  poco  circuito  non  saría  bas- 
tante a  deffendersi ;  el  volendolo  far  piu  capace ,  resta  offeso 
dallí  monlí,  che  le  circondano. 

Resta  la  üngua  de  Santo  Elmo,  la  cuale  domina  Tuno  et 
laltro  porto,  che  per  le  propicia  sua  e  molto  píu  utile,  che 
l'altre  partí  delte ,  et  e  accompagnata  di  sito  non  sotloposlo 
ad  altrí ,  anzi  resta  piu  alto  et  e  discoslo  da  Santo  Elmo  can- 
ne 500  dove  va  il  laglio,  ct  ha  solo  una  fronte  di  500  can. 
sotloposta  a  batteria ,  el  dallaltre  bande  oltre  che  e  circon- 
da ta  d  al  marc,  sonó  da  molle  partí  scoglí  allí,  che  non  vi 


206 

bisognera  miiraglia ,  o  ben  poca ,  di  maniera  che  provisto 
che  si  fusse  alia  fronte  basteria. 

Et  per  che  alcuni  hanno  laúdalo  a  far  questa  fronte  300 
can.  piu  inanzi  che  sarieno  800  can.  di  longhezza,  havendo 
ne  detto  luogo  se  non  le  medessime  300  can.  di  fronte,  dico 
et  laudo  per  esser  l'altro  sito  piu  elévalo  di  questo  el  non  sot- 
toposto  da  nessuna  banda ,  come  questo  in  qualche  partice- 
lla,  che  si  pigli  il  primo,  il  quale  olfre  che  resta  superiore 
será  piu  facile  ad  esser  fortifícalo,  guárdalo  el  difeso,  el  an- 
che sará  assai  considérala  la  lunghezza  sua  di  500  can.  el 
larghezza  di  300  et  queslo  primo  taglio  sará  discosto  |dalla 
Marza  fronte  mille  cenlo  can. ,  il  qual  taglio  o  fronte  s'e  con- 
sidéralo, che  se  si  cavasse  una  canna  fondo,  el  cinque  largo 
di  fosso  laglialo  in  quel  sasso  con  farli  una  canna  di  para- 
pello,  restaría  questa  frenlo  alta  due  canne,  la  qual  con  suoi 
beluardi,  come  va  al  mió  parere,  riusciria  defensibile  per 
questo  anno  con  iiij  mille  huomi.  El  se  ben  si  sia  calcúlalo 
el  considéralo  che  iij  mille  huomi  in  60  giorni  dovessero 
poner  quesl'opera  a  quel  termine,  non  dimeno  V.  Ecc*  ha 
da  considerare  il  lempo  breve,  che  si  ha,  el  quanti  giorni 
si  sien  per  consumare  in  proveder  questi  huomi  et  instru- 
menti,  el  metterli  nell'isola,  el  che'l  sito  di  300  can.  apena 
capiria  queslo  numero  di  iij  mille  che  potesse  travagliare, 
ollre  che  quando  si  lavora  con  gente  assai  furiosamente  non 
riesci  Topera  come  quando  si  lavora  con  comodilá,  aggiunto 
il  pericolo  del  danno  manifestó  che  si  baria  quando  l'arl.*  so- 
pragiugnesse  avanti  la  perfezione  di  quesl'opera ,  la  quale 
Dio  havesse  voluto ,  che  si  fusse  incominciala  al  partir  de 
turchi  Tottobre  passato  con  400  huomi  solamente  continui, 
che  a  quest'hora  saria  in  quel  essere  che  si  desidera ,  come 
col  suo  prudentissimo  giudizio  puo  comprender  tullo. 

A  S.'«  Elmo  et  S.'»  Ang.'»  il  S.'  G.  M.">  ha  fallo  reparar 


207 

luttavia,  et  s'usa  ogni  cura  per  aggiugnerli  tulle  le  difese 
possibile  et  disegna  poner  mille  fanti  per  luogo  con  qualche 
cav."  et  egli  co'I  Consiglio  et  resto  della  religione  relirarsi 
in  luogo  sicuro,  et  con  tutto  ció  se  li  turchi  verranno  sopra 
questi  luoghi  con  le  medessime  forze  dell  anno  passato  per 
esser  luoghi  piccoli  sottoposti  da  ogni  banda,  bisogneiá  al 
fine  che  si  perdino ,  se  la  bonlá  di  Dio  non  leva  all  inimici 
rentelletto  et  forze,  come  feci  l'anno  passato. 

II  ponte  che  se  giudicato  potersi  far  da  S.'°  Aogelo  a 
questa  lingua  non  e  da  pensarvi  per  non  esser  riuscibile 
essendo  il  tratto  lungo,  et  essendo  perdutto  alia  bocea  del 
porto  patisce  di  traversia. 

Nella  suddetta  peninsule  di  Santo  Elmo  non  e  comoditá 
alcuna  come  V.  Ecc.^  sa  salvo  di  cinque  cisterne ,  le  quali 
son'in  S.'^Elmo  delle  misure  infrascritte. 

Una  cisterna  ten  de  larga  palmi  34,  alta  36,  con  palmi 
3  d'acqua. 

Un'altra  simile  larga  palmi  30,  alta  25,  senza  acqua. 

Un'altra  simile  larga  palmi  45,  alta  37,  senza  acqua. 

Un'altra  simile  larga  palmi  34 ,  alta  36 ,  con  palmi  xi 
d'acqua. 

Un  altra  simile  larga  palmi  40,  alia  36,  senza  acqua. 

Ho  moslrato  tutto  questo  calculo  al  S.""  G.  M.'®  come 
V.  Ecc*  mi  haveva  commesso,  il  quale  molió  ben  conosci 
quanto  saria  slato  ulile,  che  questa  forlificazione  si  fusse  in-  * 
cominciata  nel  lempo  passato,  et  ancor  che  egli  sia  esperto 
et  capace,  come  qualsivoglia  altro  dimostra  pero  che  tal 
calculo  non  riusciria,  interponendo  diverse  difficulta,  che 
l'hano  intertenuto,  et  inlerlengono  da  questa  impresa,  et  Ira 
l'altra  dice  non  trovarsi  il  modo  da  spendere  ne  armi ,  ne 
vittovaglie,  ne  monizioni  di  sorle  alcuna,  ne  allre  sustanze 
per  ha  ver  consúmalo  ogni  cosa  l'anno  passato. 


208 

Travagüano  di  présenle  a  Sanio  Elmo  et  S/"  Angelo  cir- 
ca  700  huomi  Ira  quali  son  circa  80  pieconieri ,  et  da  40 
Irá  cava  pietra,  et  scarpeHiai,  et  muratori,  acconciando  le 
muri  rovinati,  riduzando  li  parapetti,  terraplenando  dove 
bisogna,  et  agiunendovi  quaiche  feritora,  che  veda  per  flan- 
co, facendo  una  cortinada  S.'°  Elmo  a  Marza  Muscetto  con 
un  fosso  largo  sei  canne,  il  quale  e  gia  fondo  sel  palmi  rag- 
guagliato  et  e  falto  il  parapetto  sopra  il  filo  d'esso  alto  sei  pal- 
mi  ,  al  quale  fanno  di  dietro  un  realto  con  qual  che  si  cava 
dalla  contrascarpa  vecchia  di  S.'"  Elmo  all  incontro  d'esso 
fosso  et  parapetto  per  poler  íiancheggiare  da  S/"  Elmo  detto 
fosso  et  cortina,  et  per  copirsi  la  schiera  dalla  punta  del 
porto  di  Marza  Muscetto,  donde  Dragut  balteva  S/"  Elmo, 
dove  hebbon  commoditá  li  turchi  l'anno  passato  d'approssi- 
marsi  coperti  la  prima  volla,  che  fu  causa  in  parte  di  quella 
perdita.  Ho  dalo  sopra  questi  luoghi  quelli  ricordi  et  avverti- 
menli  che  mi  son  parsi  a  proposito  per  difesa  loro  et  con 
tullo  questo  no  li  ho  per  sicuri  come  ho  detto  di  sopra. 


Patente  de  capitán  general  para  el  marqués  de  Pescara. 
Madrid  o  de  abril  de  15(36. 

Nombramiento  de  capitán  general  de  todas  las  tropas  enviadas 
por  España  á  Malta  á  favor  del  marqués  de  Pescara. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidoiiia. ) 

(Copia.) 

Don  Felipe ,  etc.  Por  cuanto  habiendo  entendido  por  los 
avisos  que  tenemos  de  levante  que  el  turco  vuelve  á  armar 
este  verano  para  bajar  á  ofender  la  cristiandad,  y  que  par- 


209 

ticularmenle  trae  fin  y  propósito  de  ponerse  sobre  Malta  ó  la 
Goleta,  é  importando  lo  que  importa  la  guarda  y  conserva" 
clon  de  la  dicha  isla  de  Malta ,  y  teniendo  nos  tan  particular 
afición  y  devoción  á  la  religión  y  orden  de  San  Juan ,  maes- 
tre y  caballeros  della ,  habernos  tenido  por  bien  de  les  ayu* 
dar  y  socorrer  para  esta  presente  necesidad  con  enviar  á 
nuestro  sueldo  tres  mil  españoles  viejos  de  los  presidios  de 
Italia,  y  otros  tantos  alemanes  que  habernos  mandado  hacer 
y  levantar  al  conde  París  de  Lodron,  para  que  juntamente 
con  la  que  Su  Santidad  envía,  y  juntará  y  recogerá  la  orden, 
que  por  todos  se  entiende  serán  doce  mil  infantes,  sirvan  y 
asistan  á  la  defensa  de  la  dicha  isla;  y  porque  por  ser  esta 
jornada  tan  sustancial  y  principal  conviene  proveer  persona 
calificada  y  experimentada  que  de  nuestra  parte  asista  á  lo 
sobredicho,  y  tenga  á  cargo  todos  los  dichos  seis  mil  solda- 
dos que  asi  enviamos  á  nuestro  sueldo,  por  la  presente j  te- 
niendo delante  los  méritos  y  experiencia  de  vos  el  Ule.  mar- 
qués de  Pescara ,  nuestro  capitán  general  de  la  caballería 
lijera  de  Lombardía,  y  entendiendo  que  así  cumple  al  ser- 
vicio de  Dios  Nuestro  Señor  y  nuestro,  y  bien  y  beneficio  de  la 
dicha  religión  de  San  Juan,  os  nombramos,  elegimos  y  pro- 
veemos por  nuestro  capitán  general  de  toda  la  gente  que  ha- 
bemos  enviado  ó  enviásemos  á  nuestro  sueldo  á  la  dicha  isla 
de  Malta  por  el  tiempo  que  en  ella  estuviere  y  residiere ,  con 
la  auctoridad,  preeminencias,  prerogativas  y  superioridad 
que  suelen  y  deben  tener  los  otros  nuestros  capitanes  gene- 
rales, y  queremos  y  mandamos  que  como  tal  seáis  obedes- 
cido,  reverenciado  y  acatado  de  toda  la  dicha  gente,  y  que 
todas  las  veces  que  viéredes  ser  necesario  y  conviniente  le 
rescibaisy  hagáis  rescibir  alardes,  muestras,  reseñas  y  librar 
y  pagar  su  sueldo  por  nóminas  firmadas  de  vuestro  nombre 
y  asentadas  por  los  oficiales  que  dello  tuvieren  cargo,  por- 
Tomo  XXX.  14 


210 

que  tengan  cuenta  y  razón  de  lo  que  se  librare  y  pagare ,  y 
uséis  en  ello  y  para  ello  y  para  todas  las  otras  cosas  cum- 
plideras á  la  dicha  defensa  y  jornada  el  cargo  de  nuestro  ca- 
pitán general  en  todos  los  casos  y  cosas  á  él  anexas  y  con- 
cernientes ,  siguiendo  y  guardando  en  lo  que  toca  á  la  de- 
fensa de  la  dicha  isla ,  y  á  lo  que  se  debe  hacer  con  la  dicha 
infantería,  en  la  guarda,  seguridad  y  conservación  della,  la 
orden  que  el  dicho  gran  maestre  á  quien  habéis  de  obedes- 
cer  como  á  nuestra  propia  persona  os  diere ;  y  otrosí  os  damos 
poder  y  facultad  para  que  como  nuestro  capitán  general  po- 
dáis tener  y  ejercer  la  administración  de  la  nuestra  justicia, 
así  civil  como  criminal  de  la  dicha  gente  que  fuere  á  nues- 
tro sueldo  y  gobernación  della ,  por  vos  ó  por  quien  vuestro 
poder  bebiere  en  todos  los  casos  y  cosas  á  él  anexas  y  con- 
cernientes conforme  á  derecho ,  y  que  como  tal  nuestro  ca- 
pitán general  miréis  y  sepáis  cómo  y  de  qué  manera  se  pro- 
vee y  bastesce  lo  necesario  de  vicluallas  y  otras  cosas  para 
la  provisión  de  la  dicha  gente  y  de  la  manera  que  se  distri- 
buyen y  gastan.  Todo  lo  cual  es  nuestra  voluntad  que  se 
cumpla  y  ejecute  como  si  nos  en  persona  lo  ordenásemos, 
mandásemos  y  proveyésemos ,  y  para  efecto  y  cumplimiento 
dello,  mandamos  por  el  tenor  de  las  presentes  á  cualesquier 
nuestros  ministro  ó  ministros  que  por  orden  y  comisión  par- 
ticular nuestra  ó  en  otra  cualquier  manera  hayan  de  tener  y 
tengan  á  cargo  la  dicha  gente,  y  á  los  coroneles,  maestres  de 
campo ,  capitanes ,  tenientes ,  alféreces ,  sargentos ,  cabos  y 
soldados,  contadores,  veedores,  comisarios,  tenedores  de 
bastimentos  y  municiones  y  otros  cualesquier  oficiales ,  ansí 
de  la  dicha  gente ,  como  de  la  paga  y  sueldo  della ,  que  os 
hayan  y  tengan  por  nuestro  capitán  general  de  la  infantería 
que  como  dicho  es  fuere  á  nuestro  sueldo,  y  como  á  tal  os 
respecten,  obedezcan  y  acaten  en  todo  y  por  todo,  y  hagan 


214 

y  cumplan  por  escriplo  ó  por  palabra  todos  y  cada  uno  de- 
llos  general  y  particularmente  lo  que  les  ordenáredes ,  man* 
dáredes  y  proveyéredes ,  como  si  nosotros  mismos  lo  hiciése- 
mos ,  sin  réplica  ni  contradicción  alguna,  por  cuanto  nos  os 
damos  cuan  bastante  facultad,  poder  y  autoridad  se  requiere 
y  es  necesario  para  todo  lo  susodicho  y  lo  dello  dependiente, 
anexo  y  conexo ,  lo  cual  todo  hagan  y  cumplan  so  las  penas 
en  que  caen  é  incurren  los  que  van  contra  semejantes  man- 
damientos; y  otrosí  encargamos  al  dicho  gran  maestre  y  ca- 
balleros de  la  dicha  orden  y  á  toda  la  otra  gente  que  hubiere 
y  se  junctare  en  la  dicha  isla  de  Malta ,  que  os  hayan  y  ten- 
gan por  nuestro  capitán  general  de  la  que ,  como  dicho  es^ 
fuere  á  nuestro  sueldo,  y  como  á  tal  os  respecten  y  acaten j 
De  lo  cual  mandamos  dar  y  damos  la  presente  firmada  de 
nuestra  mano  y  refrendada  del  nuestro  secretario  infras- 
cripto ,  y  sellada  con  nuestro  sello  secreto.  Dada  en  Madrid 
á  3  de  abril  1566. — Yo  el  Rey.— -Francisco  de  Eraso,  se-^ 
cretario. 

Instrucción  de  S.  M.  para  el  marqués  de  Pescara ^ 
(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Med'masidonia.) 

El  Rey. 

Lo  que  vos  el  marqués  de  Pescara ,  nuestro  capitán  ge- 
neral de  la  caballería  tijera  de  Lombardía  ^  habéis  de  hacer 
en  la  defensa  de  Malta,  donde  vais  por  nuestro  mandado,  es 
lo  siguiente : 

Lo  primero  ya  tenéis  entendido  el  preparamento  que  el 
turco  común  enemigo  de  la  cristiandad  hace  para  volver 
este  verano  sobre  la  dicha  isla ,  y  lo  mucho  que  importa  al 


212 

servicio  de  Dios  Nuestro  Señor  y  nuestro  la  conservación 
y  guarda  della,  por  lo  cual  y  teniendo  nos  tan  particular  afi- 
ción y  devoción  á  la  religión  y  orden  de  S.  Juan,  maestre  y 
caballeros  della ,  he  tenido  por  bien  de  les  ayudar  y  socor- 
rer para  esta  presente  necesidad  con  tres  mil  españoles  vie- 
jos de  los  presidios  de  Italia ,  que  ha  de  llevar  á  cargo  el 
maestre  de  campo  D,  Pedro  de  Padilla,  pagados  á  nuestro 
sueldo,  y  otros  tantos  alemanes  que  ha  ido  á  levantar  el  con- 
de Paris  de  Lodron ,  que  por  lodos  son  seis  mili. 

Y  porque  siendo  esta  jornada  tan  sustancial  y  principal 
y  habiéndose  de  juntar  allí  tan  diversos  ministros  y  nacio- 
nes ,  conviene  que  de  nuestra  parle  asista  á  ella  una  perso- 
na calificada ,  experta  y  de  experiencia  para  que  todo  vaya 
mejor  enderezado  y  no  puedan  subceder  ningunas  diferen- 
cias, os  he  elegido  y  nombrado  por  nuestro  capitán  general 
de  la  dicha  gente ,  según  veréis  por  la  patente  que  se  os  en- 
trega. 

Allende  de  la  dicha  gente  habemos  proveído  para  ayudar 
la  fortificación  que  se  ha  de  hacer  en  el  monte  de  San  Tolmo 
treinta  mil  escudos  que  han  ido  remitidos  por  cambio  á  don 
García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la  mar,  y  diez 
mili  para  municiones  y  oíros  tantos  para  vituallas,  que  por 
todos  son  cincuenta  mil ,  el  cual  tenemos  aviso  que  ha  or- 
denado de  la  manera  y  forma  que  lo  uno  y  lo  otro  se  ha  de 
hacer ;  y  cuando  llegáredes,  tenemos  por  cierto  que  estará 
proveido  como  conviene,  y  siendo  en  Italia,  terneis  inteligen- 
cia con  el  virey  de  Ñapóles  de  lo  que  de  aquel  reino  se  hu- 
biere de  llevar ,  para  que  si  no  fuere  partido  vaya  con  bre- 
vedad. 

Demás  de  lo  sobre  dicho  Su  Santidad  ha  ofrescido  de  en- 
viar á  su  sueldo  tres  mili  soldados ,  y  según  nos  refirió  el 
comendador  Pedro  Maldonado,  que  vino  como  sabéis  á  dar- 


215 

nos  noticia  del  estado  de  las  cosas  de  aquella  isla ,  recogerá 
la  orden  otros  tres  mili ,  que  por  todos  sean  doce  mili ,  con 
que  parece  que  lo  de  allí  estará  bastantemente  proveído. 

Pero  porque  el  dicho  D.  García  nos  ha  scripto  que  ha- 
biendo enviado  á  Malta  por  el  mes  de  enero  pasado,  que  era 
antes  que  llegase  la  última  resolución  que  en  estas  cosas 
hablamos  tomado ,  al  conde  de  Vicary  á  tratar  de  lo  de  la 
dicha  fortificación  y  otros  puntos ,  halló  al  dicho  maestre  y 
convento  con  determinación  de  salirse  de  la  dicha  isla  de- 
jando algún  número  de  gente  en  el  castillo  de  Sant  Ángel  y 
en  el  de  San  Telmo,  reparándolos  y  fortificándolos,  parecién- 
doles  que  viniendo  allí  la  armada  no  se  podrían  defender 
sino  con  tener  en  ella  el  dicho  número  de  doce  mili  infantes, 
con  el  cual  ha  ofrescido  de  asistir  y  estar  á  la  defensa  de  las 
dichas  plazas ;  y  aunque  tenemos  por  cierto  que  el  dicho 
maestre  no  habrá  hecho  mudanza,  y  que  speraria  respuesta 
de  lo  que  el  dicho  comendador  Maldonado  trujo ,  y  que  visto 
la  dicha  provisión  que  hacemos  no  solo  se  habrá  aquietado 
y  sosegado,  pero  con  razón  estará  muy  contento  y  satisfe- 
cho y  habrá  comenzado  la  fortificación  y  las  otras  provisio- 
nes y  cosas  necesarias  para  su  defensa  y  ofensa  de  los  ene- 
migos, todavía  por  ser  de  tanta  importancia  la  guarda  y  con- 
servación de  la  dicha  isla,  y  por  prevenir  á  todo,  me  ha  pa- 
recido, para  en  caso  que  el  dicho  maestre  hubiese  salido  de 
allá  y  no  volviese ,  nombraros  por  capitán  general  de  toda 
la  gente  que  en  ella  quedare ,  así  de  Su  Santidad  como  de  la 
religión ,  como  se  contiene  en  la  cédula  que  lleváis  aparte, 
teniendo  por  cierto  que  por  evitar  las  diferencias,  dificulta- 
des é  inconvenientes  notables  que  podrían  ofrescerse  en  el 
gobierno  y  otras  cosas ,  Su  Santidad  y  el  dicho  gran  maes- 
tre ternán  por  bien  y  serán  contentos  que  vos  quedéis  en  la 
dicha  isla  con  el  dicho  título  de  capitán  general.  Pero  por- 


214 

que  no  conviene  que  parezca  se  duda  en  la  quedada  del  di- 
cho ínaestre ,  habéis  de  tener  en  esto  secreto ,  para  no  pu- 
blicallo  acá  ni  allá  hasta  su  tiempo,  y  entonces  usareis  de 
la  dicha  cédula  y  de  la  carta  que  lleváis  para  el  comenda- 
dor mayor  de  Castilla  nuestro  embajador  en  Roma,  para  que 
hable  á  Su  Santidad  de  nuestra  parte,  pidiéndole  que  por 
las  sobredichas  causas  ordene  á  su  capitán  general  de  la 
dicha  gente  que  os  obedezca ,  que  yo  confio  Su  Santidad  lo 
hará  de  buena  voluntad ,  y  asimismo  el  dicho  maestre ;  y 
estando  y  quedando  en  la  dicha  isla ,  le  habéis  de  obedecer 
en  lo  tocante  á  la  defensa ,  guarda  y  conservación  della,  todo 
el  tiempo  que  allí  estuviéredes  como  á  mi  misma  persona, 
que  yo  soy  cierto  os  comunicará  y  terna  con  vos  en  lo  que 
se  hubiere  de  hacer  y  proveer  la  inteligencia  y  buena  cor- 
respondencia que  es  razón ,  según  gelo  scribimos,  y  se  ayu- 
dará de  vuestrí).  persona  y  parescer  como  es  justo  y  lo  me- 
recéis. 

Y  para  en  caso  que  Su  Santidad  hubiese  revocado  ó 
revocase  los  dichos  tres  mil  infantes  y  el  maestre  se  saliese, 
porque  la  dicha  isla  quede  toda  bien  proveída,  habernos 
dado  comisión  al  dicho  D.  García  para  que  haga  levantar 
otros  tres  mil  italianos  mas  á  nuestro  sueldo  para  que  se  me- 
tan y  pongan  en  la  dicha  isla,  con  los  cuales  y  los  seis  mil 
spañoles  y  alemanes  y  los  que  dejará  el  dicho  maestre ,  como 
arriba  va  apuntado ,  y  con  los  caballeros  de  la  orden  que  ne- 
cesariamente acudirán,  tenemos  por  cierto  habrá  bastante 
número  para  defender  la  dicha  isla  5  pero  aunque  faltase  al- 
gún número  de  los  dichos  doce  mil  hombres ,  estamos  tan 
satisfecho  de  vuestra  persona  y  valor ,  que  no  dudamos  sino 
que  os  meteréis  en  ella,  y  así  os  lo  mandamos  expresa- 
piente. 

Y  en  lo  fjue  toca  á  la  dicha  fortificación  que  se  ha  de 


215 

hacer ,  porneis  la  mayor  diligencia  que  fuere  posible ,  pro- 
curando que  sea  en  el  monte  de  San  Telmo ,  pues  es  el  mas 
conveniente  sitio  como  entenderéis  del  dicho  D.  García,  ó 
si  en  esto  hobiese  dificultad ,  en  el  sitio  que  paresciere  mas 
conveniente ,  así  para  lo  del  agua  como  para  seguridad  de 
la  gente  y  los  otros  efectos  que  se  pudieren  hacer. 

Y  porque  teniendo  como  se  entiende  que  el  turco  tiene 
fin  de  bajar  este  verano  mas  temprano  que  el  pasado ,  con- 
viene anticiparnos  todo  lo  que  se  pudiere  en  las  provisiones 
que  se  hubieren  de  hacer ,  os  encargo  que  luego  os  partáis 
y  vais  con  la  bendición  de  Nuestro  Señor  en  Italia ,  y  de  allí 
paséis  á  Sicilia ,  que  cuando  llegáredes  no  tengo  duda  sino 
que  ya  estará  toda  la  dicha  infantería  alemana  y  spañola  y 
vituallas  y  municiones,  y  que  el  dicho  D.  García  lo  habrá 
hecho  llevar  y  conducir ,  como  se  lo  tenemos  scripto ,  del 
cual  y  del  dicho  virey  de  Ñapóles  os  informareis  de  camino 
el  estado  en  que  está  lo  uno  y  lo  otro ,  y  si  faltare  algo  pro- 
curareis que  se  lleve ,  y  con  ambos  y  cada  uno  de  ellos  os 
encargo  tengáis  toda  buena  inteligencia  y  correspondencia 
como  yo  sé  que  lo  haréis ,  así  por  mi  servicio  como  por  lo 
que  toca  al  bien  del  negocio,  que  en  ello  y  en  que  continua- 
mente me  aviséis  de  lo  que  se  ofresciere  me  haréis  mucho 
placer.  Fecha  en  Madrid  á  3  de  abril  mdlxvi. 

De  letra  del  Rey. 

Lo  que  toca  á  la  fortificación  de  Malta  os  encomiendo 
mucho ,  y  que  sea  en  el  monte  de  San  Telmo  como  lo  llevó 
entendido  Ascanio  de  la  Coma. —  Yo  el  Rey. —  Francisco  de 
Eraso. 


21  (i 


Copia  de  carta  orUjinal  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M.. 
fecha  en  Mesina  á  26  de  marzo  1506. 

Discurre  sobre  la  guarnición  y  vituallas  de  Malta. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  ii^O.J 

S.  G.  R,  M. 

Estando  para  partirme,  y  habiendo  escrito  el  despacho 
que  llevará  este  correo,  al  mismo  puncto  que  me  iba  á  em- 
barcar, llegó  el  de  V.  M.  con  sus  cartas  de  18  de  hebrero 
y  dos  y  3  del  presente  en  respuesta  de  las  mías  de  26  de 
enero  y  dos  de  hebrero,  y  por  no  detenerme  responderé  so- 
lamente á  los  cabos  mas  principales.  Cuanto  á  los  3,000 
hombres  que  V.  M,  manda  añadir  para  Malta,  mil  tudescos 
y  dos  mil  españoles,  hay  en  ello  dos  dificultades,  la  una  de 
la  vitualla ,  porque  no  se  hará  poco  si  se  puede  proveer  lo 
mandado  hasta  aquí.  Para  lo  cual  se  ha  emprendido  de  ha- 
cer cuarenta  mil  quintales  solo  para  la  Goleta  dése  peso  de 
Castilla  o  poco  menos,  como  digo  en  el  despacho  que  va  con 
este,  y  no  obstante  lo  que  escribí  á  V.  M.  de  que  promete» 
ria  al  marqués  la  paga  de  las  victuallas ,  y  que  él  se  encar- 
gase dellas  dándole  la  saca  que  para  ello  fuese  menester, 
viendo  que  las  cosas  de  Malta  iban  de  diferente  manera  em- 
prendí luego  de  hacerlas  también  para  aquella  isla,  y  ansí 
mandé  luego  hacer  cuatro  mil  salmas  de  harina,  de  las  cua- 
les salen  casi  deciseis  mil  quintales  de  pan,  peso  de  España, 
sin  esta  cuantidad  se  hacen  en  Ñapóles  seis  mU  quintales  de 
bizcocho  que  son  doce  mil  de  España.  Con  este  pan  y  con 
tre3  rnil  salmas  de  trigo,  del  cual  salen  cerca  de  doce  mil 


2i7 

quínteles ,  peso  de  Castilla ,  pienso  proveer  lo  de  Malta :  pero 
si  se  añade  gente,  como  agora  se  hace,  dudo  que  pueda  bas- 
tar lo  dicho,  porque  el  darles  trigo  no  es  remedio  no  tenien- 
do moliendas  bastantes ,  y  las  tres  mil  salmas  dello  acompa- 
ñándolo con  el  bizcocho  y  la  harina  es  lo  mas  que  ellos  pue- 
den moler ,  ni  aquí  se  puede  hacer  mas  harina  ni  pan  del 
que  se  hace ,  y  en  esta  cuantidad  de  vitualla  verá  V.  M. 
cuanto  mas  número  deilas  se  hace  que  los  quince  mil  qui- 
nientos que  escrebí ,  que  creo  subirán  á  mas  de  70,000,  sin 
lo  que  es  fuerza  ir  haciendo  para  la  armada.  El  otro  incon- 
veniente es ,  que  habiendo  de  dar  dos  mil  españoles,  y  ha- 
biendo escrito  con  el  despacho  pasado  que  aun  con  no  dar- 
los no  me  quedaba  gente  para  el  armada  ni  aun  queda  para 
el  reino  ,  no  tengo  que  decir  sino  que  en  esto  de  la  gente 
obedesceré  lo  que  se  me  manda,  y  en  lo  de  las  vituallas,  si 
tuviere  remedio  ó  se  hallare,  se  hará ,  que  hasta  agora  yo  no 
lo  veo. 

En  lo  de  la  Goleta ,  yo  deseo  que  allí  se  pueda  poner  la 
gente,  y  el  mayor  inconveniente  que  hasta  ahora  hallo  es 
el  poco  tiempo  que  tendrán  de  fortificarse,  y  lo  que  de  nue- 
vo escribo  de  puerto  Fariña,  quisiera  que  hubiera  llegado 
el  prior  D.  Hernando,  para  que  entrambos  con  los  demás  lo 
viéramos,  y  conviniendo  por  lo  que  dice  verlo  yo  primero 
que  vaya  á  Genova,  allí  podré  hacer  relación  á  D.  Hernan- 
do de  mi  parescer  y  del  de  Ascanio  y  de  los  demás  que  lle- 
varé conmigo,  y  si  él  fuere  de  otra  opinión,  remitirme  he  á 
su  juicio,  pues  á  él  le  toca  defenderlo,  y  á  mí  solo  hacer  lo 
que  V.  x\I.  me  manda  poner  por  obra.  He  dicho  que  me  tomó 
el  correo  de  V.  M.  yéndome  á  embarcar,  y  con  propósito  de 
irme  con  todas  las  galeras  la  vuelta  de  la  Goleta  por  la  via 
de  Palermo,  no  obstante  que  no  me  lo  podia  impedir  la  tar- 
danza de  las  galeras  de  Xápolcs,  de  los  cuales  debe  ser  cau- 


218 

sa  los  ruines  tiempos  que  corren  y  han  corrido,  y  viendo 
agora  que  manda  V.  M.  que  se  den  tres  mil  hombres  mas 
al  marqués ,  no  obstante  que  yo  tenia  y  tengo  que  no  ha- 
biendo puesto  mano  en  la  fortificación  estarán  los  nueve  y 
los  doce  á  manifiesto  peligro ,  para  verlo  con  los  ojos  me  ha 
parescido  ir  yo  mismo  con  diez  galeras  á  Malta ,  las  cuales 
cargo  aquí  de  la  vitualla  necesaria ,  y  de  otras  cosas  que 
han  de  ir  para  la  Goleta.  Llegado  en  Malta  veré  con  el  maes- 
tre ,  Ascanio ,  Cabrio  Cervellon  y  con  el  Fratin  que  llevo 
conmigo  á  la  Goleta  si  tiene  plática  el  poder  poner  allí  en 
Malta  esta  gente  en  parte  que  se  pueda  defender,  y  en  caso 
que  doce  mil  no  fuesen  bastantes  y  hubiese  alojamiento  se- 
guro para  veinte  ó  veinte  y  dos  mil,  digo  que  si  no  convinie- 
re hacer  lo  de  la  Goleta ,  que  dejándola  lo  mejor  proveída 
que  se  pueda,  si  ansí  paresciere  al  prior  D.  Hernando,  pon- 
dré allí  el  número  designado  para  la  Goleta,  y  siento  mu- 
cho que  las  ocasiones  me  fuercen  á  tomar  resoluciones  nue- 
vas; y  pasada  esta  ocasión,  forzosa  á  mi  juicio,  observaré 
de  aquí  adelante  al  pié  de  la  letra  lo  que  se  me  mandare, 
porque  con  esto  estaré  mas  cerca  de  acertarlo  todo  y  de 
asegurar  mis  yerros;  y  si  por  caso  ni  los  nueve,  ni  los  doce, 
ni  el  número  mayor  conviniese  para  lo  de  Malta  por  falta 
de  alojamiento  que  tenga  las  cualidades  que  escribo  en  el 
despacho  que  con  esta  va ,  ni  cumpliese  ejecutar  el  poner  la 
gente  en  la  Goleta ,  en  tal  caso  no  hay  para  que  embarcar 
tan  gran  multitud  de  gente  ni  hacer  tan  notable  gasto  en 
ella,  y  para  excusarlo  si  no  conviniere  lo  dicho  destas  dos 
plazas,  he  determinado  de  ir  yo  primero  á  verlas,  porque  si 
la  hubiese  de  embarcar  y  irme  á  resolver  sobre  el  lugar  en 
estos  dos  particulares,  teniéndola  en  el  armada,  caerse  hia  en 
el  inconveniente  del  sueldo  y  del  espender  la  vitualla  que 
tenga,  tanto  mas  que  en  la  parte  adonde  agora  está  puede- 


219 

se  sacar  della  lo  que  habrá  costado.  Pero  si  las  ando  llevan- 
do ,  embarcando  y  desembarcando  demás  de  lo  que  ellas 
mismas  pierden  y  de  lo  que  se  consume  y  desperdicia  es 
muy  notable  el  gasto  de  los  fletes  de  los  navios  que  les 
han  de  llevar ,  no  pudiendo  ir  todas  en  las  galeras ,  y  aun- 
que yo  quisiera  que  como  principal  dueño  se  hallara  don 
Hernando  á  estas  determinaciones,  no  lo  consiente  á  mi  jui- 
cio lo  que  digo ;  pero  como  escribo  se  le  hará  relación ,  y  si 
fuere  de  otra  opinión  en  cuanto  á  la  mia  me  remitiré  á  su 
parescer,  pues  tiene  el  cargo  dello,  y  en  caso  que  los  tu- 
descos se  hubiesen  de  despedir ,  en  lo  cual  hasta  hoy  no  he 
dado  orden  ninguna,  ni  la  pienso  ni  puedo  dar ,  sin  ver  lo  di- 
cho, veré  si  el  dinero  que  se  les  hubiere  dado  será  bien  dar- 
les orden  que  lo  vayan  á  servir  en  Hungría ,  pues  para  la 
defensa  de  la  venida  del  turco  en  aquellas  partes  afirmada 
por  tantos  avisos  se  podrá  hacer  con  esto  algún  provecho  al 
emperador. 

El  resto  de  las  galeras  que  aquí  tengo,  llevando  yo  las 
diez  á  Malta ,  envío  por  la  costa  de  tramontana  la  vuelta  de 
Palermo  y  Trápana  para  que  carguen  todas  las  victuallas  y 
municiones  que  pudieren ,  para  que  allí  se  junten  con  don 
Sancho,  el  cual  ha  de  hacer  lo  mismo,  y  dáseles  orden  que 
con  toda  la  priesa  posible  se  despachen  y  se  vayan  drechos 
á  la  Goleta ,  á  donde  les  esperaré  ó  daré  orden  de  lo  que 
hubieren  de  hacer ;  y  viendo  que  en  el  despacho  de  V.  M. 
manda  dar  galeras  al  prior  D.  Hernando  para  pasar  á  Ña- 
póles y  á  Sicilia,  y  porque  esto  seria  desconcertar  todo  d 
designo  que  tengo  hecho  dellas  para  lo  que  se  ha  de  efectuar, 
y  no  hallándolas  cuando  yo  llegase  allí  para  embarcar  lo  que 
en  ellas  hubiese  de  traer,  seria  de  notable  inconveniente ;  y 
ansí  escribo  al  prior  que  me  espere  en  Genova  á  donde  seré 
presto ,  y  á  las  galeras  que  no  se  partan  de  allí. 


Después  que  escribió  el  virey  de  Ñapóles  á  V.  M.  la  di- 
ficultad que  había  en  la  fábrica  de  los  seis  mil  quintales  de 
bizcocho ,  rae  escribió  á  mí  que  se  harían ,  ó  la  mayor  cuan- 
tidad que  se  pudiese ,  y  serán  bien  menester. 

Los  cient  mil  escudos  que  V.  M.  ha  mandado  tomar  á 
cambio  al  virey  de  Ñapóles  para  que  se  disponga  dellos  á  mi 
voluntad  han  sido  bien  necesarios,  y  pagadas  las  victuallas 
que  deste  reino  se  han  de  enviar  á  Malta,  creo  que  queda- 
rán pocos  mas  de  lo  que  se  sacará  dellas  mismas  en  la  parte 
que  han  de  comer  los  soldados  que  allí  entraren ,  y  lo  que 
se  descontará  dellas  á  la  gente  que  V.  M.  paga ,  ansí  que  la 
parte  que  dellos  manda  se  dé  á  la  gente  de  la  Goleta,  no 
creo  que  podrá  ser  tan  cumplida  como  V.  M.  escribe.  Al 
virey  de  Ñapóles  escribo  que  los  tenga  en  orden  sin  remi- 
tirlos aquí  por  los  inconvenientes  que  tengo  escrito ,  y  por- 
que habrá  mas  ganancia  de  traerlos  á  mi  posada  en  contado; 
pero  esta  provisión  podrá  ser  mas  larga  ó  mas  corta  según 
la  determinación  que  se  tomare  en  lo  que  se  ha  de  hacer ,  y 
cuando  paresciese  no  convenir  poner  en  la  Goleta  la  gente 
que  V.  M.  manda,  y  lo  fuese  ponerla  en  Malta,  quedará  con 
ella  el  prior  D.  Hernando  como  V.  M.  ordena.  Cuya  vida 
Nuestro  Señor  guarde  largos  años  como  la  cristiandad  ha 
menester.  De  Mesína  á  26  de  marzo  de  1566. — Criado  y 
vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. — Don 
García  de  Toledo. 

Sobre  de  la  caria. — A  la  S.  C.  R.  M.  el  Rey  nuestro 
señor. 


m 


Dentro  de  esla  se  \       ^'P'^  ^\  ^^'"^^  9"^  ^'  ^^'''^  ^' 
halla  la  carta  si-   (  Toledo  escribió  al  gran  maestre  á  io 

^''''^''^^''  ¡  de  hebrero  de  ióm. 

Para  enriar  á  S.  M. 

Ill."°  y  R."o  Señor  : 

Por  las  cartas  de  S.  M.  verá  V.  S.  111.  *'  el  efecto  de  lo 
que  Boninsigne  escribió  en  su  caria,  á  las  cuales  me  remito; 
verá  también  V.  S.  el  parescer  que  S.  M.  envía  sobre  la  de- 
fensa de  Malta ,  que  siendo  tan  prudente  no  tendré  yo  raas 
que  decir  sino  remitirme  á  él ,  el  cual  en  su  nombre  lo  envío 
á  V.  S.  Con  esta  manda  también  S.  M.  que  para  la  fábrica 
del  monte  de  San  Telmo  se  den  á  V.  S.  50  mil  escudos  para 
que  particularmente  se  gasten  en  ella.  Da  también  10  mil 
escudos  para  municiones  de  pólvora  y  otros  diez  mil  para 
vituallas,  la  cual  suma  de  cincuenta  mil  tengo  ya  en  mi 
poder  para  hacer  dello  lo  que  S.  M.  manda  á  dispusicion  y 
orden  de  V.  S.  Queda  solo  saber  su  resolución  y  voluntad 
para  que  acá  se  ejecute  brevemente  lo  que  queda  por  hacer 
y  advertirme  que  género  de  vituallas  quiere  para  que  se 
pueda  proveer  con  la  presteza  que  el  caso  requiere.  También 
tengo  nueva  cierta  de  Roma,  como  V.  S.  III.™*  lo  veerá  por 
ese  capítulo,  que  Su  Santidad  da  los  o  mil  italianos  y  el  cargo 
dellos  á  Pompeyo  Golona ,  y  que  también  acabaría  de  pagar 
la  cuantidad  del  dinero  prometido  por  papa  Pío ;  de  manera 
que  con  los  tres  mil  hombres  que  Muns."^  de  Gio  y  aquellos 
caballeros  me  dijeron  que  V.  S.  quería  sustentar,  serán 
nueve  mil  los  que  tendrá  en  esa  isla  sin  los  caballeros  de  la 
orden.  Y  por  quedar  esperando  con  deseo  respuesta ,  no  diré 


222 

mas  de  suplicar  á  V.  S.  que  me  la  mande  enviar  con  bre- 
vedad» 

También  manda  S.  M.  que  se  procure  de  meter  ahí  dos 
mil  botas  de  vino.  Veeré  luego  de  tractar  con  mercaderes 
para  que  se  comience  á  hacer ,  porque  yo  les  prometeré  que 
serán  bien  tractados  de  lo  que  vendieren  j  y  ansí  suplico 
á  V.  S.  que  lo  mande  estonces  ejecutar. 

Y  para  que  este  despacho  vaya  al  recado  que  conviene 
y  también  para  que  visite  á  V.  S.  111.™^  y  me  traiga  par- 
ticular relación  de  su  salud  y  de  todo  lo  de  allá ,  envío  al  al- 
férez Bena vides  j  con  el  cual  me  podrá  V.  S.  escrebir  y  en- 
viar á  decir  lo  que  le  ocurriere  *  porque  es  persona  plática  y 
de  inteligencia ,  y  que  sabrá  bien  hacer  cualquier  cosa  que 
se  le  ordenare,  y  ansí  le  dará  V.  S.  llh""^ entera  fée  y  cré- 
dito en  todo  lo  que  de  mi  parte  le  diere ,  mandándole  despa- 
char con  la  mas  brevedad  que  se  pudiere ,  considerando  de 
la  importancia  que  es  cualquiera  tiempo  que  se  pierde* 


'V()h  0(; 


i^'OI,  í'-'V    «r. 


2^3 

Copta  de  caria  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  3/., 
fecha  de  galera  sobre  Trápana  á  9  de  abril  de  1566. 

En  la  carpeta  dice  í       ^^  ^^  venido  con  esta  carta  la  co^ 
por  bajo  de  este  epí-  {     . 
grafe:  (  pía  del  breve  que  en  ella  dice. 

Al  mareen  de  esta  ad-  i       Con  las  cartas  del  comendador  de 
vertencia  de  letra  del  ]  p„^»-ii    „•  „      ,    i  ,, 

secretario  puso  el  Rey     ^^^^^"^  ^^"^  ^^^^  ^''^^'6'  ^^^  él  poco 
de  la  suya:  [  importa  para  lo  que  hace  al  caso. 

Le  entera  de  su  viaje  á  Malta  y  de  lo  que  escribió  al  comenda- 
dor mayor. 

f  Archivo  general  de  Simancas.  —Negociado  d€  Estado,  legajo 
nüm.  1150.^ 

S.  C.  R.  M. 


Yo  llegué  en  Malta  á  los  3  del  presente ,  y  estuve  allí 
hasta  los  siete  que  partí,  ansí  por  causa  de  no  ser  el  tiempo 
bueno,  como  por  lo  que  hubo  que  hacer,  y  llegué  aquí  en 
Trápana  á  los  9 ,  á  donde  hallé  las  galeras  que  yo  habia  en- 
viado con  D.  Juan  de  Cardona,  y  de  las  de  D.  Sancho  nue- 
va que  estaban  en  Palermo ,  cargando  lo  que  allí  habían  de 
lomar.  En  viniendo,  me  partiré  luego,  aunque  al  presente 
no  hace  tiempo,  y  llegando  como  digo  en  Malta,  fui  luego 
en  compañía  del  maestre ,  Ascanio  de  la  Coma  y  Cabrio  Cer- 
vellon  á  ver  en  el  término  que  estaba  la  fábrica  de  la  nueva 
ciudad ,  y  hállela  en  tal  estado  que  no  habia  que  pensar  de 
aprovecharse  della.  Visto  esto,  fuimos  á  reconoscer  el  sitio 
de  la  Marza  para  ver,  como  escrebí  á  V.  M.  á  los  26  del  pa- 
sado, si  era  posible,  poniendo  grueso  golpe  de  gente  en  ella, 


224 

tener  esperanza  de  poder  asegurar  el  monle  de  San  Telmo, 
tendiéndonos  con  la  cola  de  la  gente  de  tal  manera ,  que  pu- 
diésemos guardar  la  frente  desla  montaña ,  y  hallamos  los 
mismos  inconvenientes,  y  aun  mayores  de  los  que  escrebí 
por  la  dicha  carta.  Reconoscimos  y  vimos  lo  de  San  Miguel, 
y  el  Burgo  y  Santa  Margarita,  y  viéndolo  en  términos  que 
es  imposible  poder  tener  esperanza  de  buen  subceso ,  antes 
de  clara  perdición  de  la  gente  que  en  este  sitio  se  metiese. 
Concluimos  todos  cuatro  sin  haber  contrariedad  entre  nos- 
otros, ni  poderla  haber  por  ser  el  caso  manifiesto,  que  no 
convenia  dejar  allí  este  golpe  de  gente,  porque  en  las  partes 
á  donde  consiente  el  alojamiento  y  sitio  del  poder  estar  la 
gente  con  mas  seguridad,  que  seria  la  dicha  montaña  de  San 
Telmo,  no  lo  sufre  el  agua,  y  á  donde  se  tendria  abundancia 
della  que  es  en  la  Marza,  no  lo  permite  el  sitio  por  muchas 
causas  notorias,  las  cuales  por  no  cansar  á  V.  M.  habiendo 
tractado  tantas  veces  desta  materia ,  no  tornaré  á  alargarme 
en  ellas;  y  todavía  diera  mas  particular  cuenta  á  V.  M.  de 
lo  que  allí  pasó  y  de  otras  cosas ,  sino  que  llegando  en  este 
punto  las  galeras  de  Ñapóles,  me  parto  en  el  mismo  para  la 
Goleta.  De  lo  que  allí  habré  visto  y  de  lo  demás  que  se  ofres- 
ciere  daré  particular  cuenta  á  V.  M.  desde  Genova.  Y  por- 
que Su  Santidad  me  escribió  el  breve ,  cuya  copia  será  con 
esta,  y  le  he  respondido  á  él  lo  que  V.  M.  verá  por  la  copia 
que  enviará  el  comendador  mayor,  y  de  lo  que  á  él  mismo 
le  escribo  por  no  tener  tiempo  para  hacerlo,  me  remitiré  á 
ellas ,  por  si  acaso  se  ofresciese  despachar  correo  desde  Ro- 
ma, antes  que  yo  pueda  llegar  á  Genova  para  hacerlo.  Y 
Nuestro  Señor  guarde  por  largos  años  la  vida  de  V.  M.  como 
la  cristiandad  ha  menester.  De  galera  sobre  Trápana  á  1 1 
de  abril  1566.— Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales 
pies  y  manos  besa. — Don  García  de  Toledo. 


225 

Sobre  de  la  carta. — A  la  S.  G.  R.  M.  del  Rey  nuestro 
señor. 


Dentro  de  esta  se 
hallan  las  dos  cartas 
sigruientes: 


Copia  de  caria  original  del  gran 
maestre  á  S.  M.  De  Malta  á  1  de 
abril  de  1560. 


S.  M."  Cat.* 


El  Sr.  D.  García  de  Toledo  llegó  aquí  á  5  del  presente 
con  diez  galeras,  con  quien  recebí  la  de  V.  M.  de  o  del  pa- 
sado, y  en  aquel  mismo  púnelo  en  nuestra  compañía  Asca- 
nio  de  la  Corna  y  el  prior  de  Hungría  Fr.  Cabrio  Cervellon 
fuimos  á  ver  todos  los  lugares,  así  destas  habitaciones  como 
de  San  Telmo  y  de  la  Marza ,  y  después  de  haber  madura- 
mente considerado  todo  lo  que  humanamente  podemos  al- 
canzar ,  hemos  concurrido  finalmente  todos  en  uno ,  y  es 
nuestro  parecer,  que  por  muchos  inconvenientes  que  hay  no 
conviene  que  vengan  aquí  los  doce  mil  hombres  que  se  trata 
de  juntar,  porque  no  hallamos  según  las  cosas  están  al  pre- 
sente lugar  apto  donde  con  justa  razón  se  pueda  esperar  con 
ellos  la  defensa  desta  isla,  viniendo  el  enemigo  con  el  pro- 
supuesto y  fuerza  que  puede.  Nuestro  Señor  sea  servido  que 
los  avisos  que  envié  á  V.  M.  á  los  16  del  pasado  sean  cier- 
tos, y  que  haya  mas  lugar  de  ponernos  en  defensa. 

Toda  esta  religión  é  yo  besamos  humilmenle  las  reales 
manos  de  V.  M.  por  el  nuevo  y  notable  amparo  y  merced 
que  ha  mandado  hacer.  Plegué  á  Nuestro  Señor  que  guarde 
á  V.  M.  muchos  años  como  esta  su  religión  ha  menester,  y 
se  lo  suplicamos  continuamente ,  y  á  nosotros  nos  dé  gracia 
que,  como  lo  deseamos  y  debemos,  podamos  con  nuestras 
personas  mostrar  en  su  servicio  la  obligación  en  que  estas  co- 
ToMO  XXX.  45 


sas  nos  tienen.  En  Malta  á  7  de  abril  1566. — Humilde  ser- 
vidor.— El  gran  maestre. — Jehan  de  Vállete. 

Sobre  de  la  carta. — A  la  Sacra  Maj.'*  Católica. 


Copia  de  una  carta  que  el  Sr.  D.  Garda  de  Toledo  escribió 
al  comendador  mayor  mi  señor  en  9  de  abril  de  1566. 

Ill."°  Señor: 

Habiendo  llegado  aquí  ayer,  hallé  una  carta  de  V.  S.  í. 
de  25  del  pasado,  y  mucha  merced  con  ella  por  saber  de  la 
salud  de  V.  S.  I.  Con  ella  recibí  el  breve  de  Su  Santidad ,  al 
cual  respondo,  como  abajo  diré.  Servirá  esta  para  dar  noticia 
á  V.  S.  de  todo  lo  que  se  ha  hecho  después  que  últimamente 
le  escribí ,  y  ansí  digo  que  estando  para  partir  de  Mesina  con 
las  galeras  que  se  hallaban  allí  para  ejecutar  lo  que  S.  M. 
ha  mandado  en  lo  de  Malta  y  la  Goleta ,  y  para  juntar  su  ar- 
mada llego  allí  Ascanio  de  la  Corna ,  y  Uniendo  relación  de 
algunas  personas  que  en  Malta  no  se  habia  puesto  mano ,  de 
manera  que  de  la  ejecución  de  la  obra  comenzada  de  tan 
pocos  dias  pudiese  nacer  ninguna  esperanza  de  defensa ,  co- 
mencé á  pensar  si  se  podría  con  grueso  golpe  de  gente  suplir 
á  lo  que  faltase  de  murallas  y  fosos ,  y  parecióme  que  en  caso 
que  no  conviniese  dejar  en  el  sitio  de  la  Goleta  los  12  mil 
hombres  designados  por  S.  M.  para  lo  de  allí ,  que  en  tal  caso 
se  podría  convertir  esta  provisión  en  lo  de  Malta,  porque  jun- 
tándolos con  los  que  Su  Santidad  y  S.  M.  daban,  llegarán  á 
veinte  mil  infantes,  y  que  si  habia  sitio  para  alojarlos  en 
parte  que  con  su  retaguardia  pudiesen  ocupar  el  principio 
de  la  montaña  de  San  Tolmo ,  y  con  su  vanguardia  tenderse 
tanto  que  pudiesen  beber  del  agua  de  la  Marza ,  que  con  esta 


227 

mSrtfeVa  de  fuerza ,  aunque  no  hubiese  otro  reparo,  era  bas- 
tante á  sustentar  la  isla.  Para  ver  esto  envié  á  Ascanio  de  la 
Gorna  y  para  que  me  trújese  la  última  resolución  de  lo  que 
el  maestre  queria ,  y  me  viniese  con  una  galera  á  buscar  á 
la  Goleta ,  á  donde  se  podria  determinar  de  darle  el  número 
señalado  ó  añadir  el  que  digo ,  y  dentro  de  tres  dias  después 
de  Ascanio  partido  me  llegó  un  correo  de  S.  M.  con  cartas 
de  los  tres  del  pasado ,  en  que  me  mandaba  dar  sin  los  tres 
mil  otros  dos  mil  españoles  y  mil  tudescos  para  lo  de  Malta, 
y  para  ver  si  este  número  bastaba  ó  si  era  menester  mayor, 
ó  si  el  uno  ó  el  otro  podian  estar  allí  con  alguna  seguridad, 
determiné  de  ir  yo  mismo  á  verlo  porque  las  provisiones  que 
S.  M.  mandaba  hacer  eran  prudentísimas ,  porque  las  hacían 
con  presupuesto  y  pensamiento  que  la  obra  estuviese  muy 
adelante,  ó  á  lo  menos  en  término  que  detrás  de  alguna  poca 
fábrica  ó  labor  pudiese  la  gente  oponerse  á  la  defensa ;  y 
ansí  para  efectuar  lo  dicho  y  tomar  resolución  en  ello,  mandé 
que  treinta  y  seis  galeras  viniesen  en  Palermo  y  en  Trá- 
pana á  cargar  todas  las  municiones  y  vituallas  que  pudieseOj 
que  no  han  sido  pocas ,  para  llevarlas  en  Malla  si  ansí  con- 
viniese ,  ó  descargarlas  en  la  Goleta ,  y  llevando  diez  en  mi 
compañía  cargadas  de  tomismo,  habiendo  hecho  traer  cuatro 
mil  y  quinientos  españoles  de  Ñapóles,  que  col  otros  dos  mil 
que  yo  tengo  en  este  reino  hacen  el  número  de  seis  mil  y 
quinientos ,  con  intincion  que  si  el  maestre  quisiese  con  bre- 
vedad su  gente  sin  esperar  los  tudescos,  se  pudiese  meter  en 
la  isla  el  número  dado  por  S.  M.  al  principio  y  al  fin.  Llegué 
en  Malta  á  los  5  del  presente  y  hallé  la  fábrica  en  el  estado 
que  yo  me  imaginaba.  Fui  luego  á  ver  el  sitio  del  alojamiento 
que  podrían  tener  los  i 2  mil  hombres,  ó  los  veinte  mil  si  se 
pudiesen  poner ;  y  si  en  la  montaña  de  San  Telmo  se  hubiera 
hecho  provisión  de  agua  conforme  á  lo  que  yo  acordé  por  la 


228 

carta  de  los  26  de  octubre ,  sin  otra  ninguna  manera  de  re- 
paro  bastaran  los  veinte  mili  hombres ,  y  aun  los  doce ,  á 
defenderla  si  en  ella  tuvieran  que  beber;  pero  habiendo  de 
beber  forzosamente  del  agua  de  la  Marza ,  y  estando  esta 
bien  lejos  de  la  montaña ,  si  nos  quisiéramos  allegar  á  la 
Marza  era  menester  apartarnos  de  la  montaña,  porque  la 
gente  no  bastaba  á  ocupar  todo  el  sitio ,  y  apartándonos  de 
ella  podian  los  enemigos  ocuparla ,  los  cuales  podian  beber 
en  la  dicha  montaña  de  San  Telmo ,  porque  por  mar  con  sus 
barcas  y  esquifes  podrán  traer  agua  á  su  gente ,  y  por  mas 
que  el  castillo  de  San  Telmo  se  lo  quisiera  estorbar,  no 
podia  quitar  que  de  noche  no  entrase  la  dicha  gente  á  pro- 
veerlos della,  no  embargante  que  el  castillo  fuera  presto 
perdido.  Este  alojamiento  que  digo  que  habia  de  tener  nues- 
tra gente  cerca  de  la  Marza  era  un  sitio  alto  y  fuerte,  el  cual 
habia  ya  reconocido  Ascanio  de  la  Corna  ,  ni  habia  otro  nin- 
guno en  qué  escoger  ,  aunque  era  mayor  de  lo  que  deseá- 
bamos ;  y  cuando  los  turcos  no  quisieran  ocupar  la  montaña 
de  San  Telmo ,  tenian  en  frente  del  nuestro  á  tiro  de  cañón 
otro  alojamiento  mas  alto  y  mas  fuerte  que  el  nuestro;  y 
aunque  con  su  artillería  no  nos  podian  ofender  porque  detrás 
de  nuestra  montaña  nos  podíamos  encubrir ,  habia  en  el  otro 
inconveniente  muy  notable ,  el  cual  es  que  en  medio  destos 
dos  montes  y  alojamientos  hay  un  llano  de  un  tercio  de  milla 
en  el  cual  está  el  agua,  y  á  la  caida  de  nuestra  montaña  no 
habia  sino  dos  ó  tres  pozos ,  y  á  la  de  los  enemigos  era  todo 
el  golpe  della ;  y  si  quisiéramos  bajar  á  gozar  desta  cantidad 
de  agua ,  como  la  necesidad  forzara ,  veníamos  á  ponernos, 
no  solo  en  bajo  de  su  artillería  y  arcabucería,  pero  de  sus 
flechas,  y  esto  era  implaticable  para  quien  tuviera  el  número 
de  gente  mayor,  cuanto  mas  para  los  menores. 

Si  nosotros  quisiéramos  ocupar  este  alojamiento  que  los 


229 

turcos  podían  tomar,  aparlábamonos  del  todo  de  los  puer- 
tos y  de  la  montaña  de  San  Telmo,  y  dábamos  comodidad  al 
enemigo  para  que  sin  ningún  contraste  se  hiciese  señor  de 
la  montaña  y  de  los  puertos,  y  pudiese  combatir  el  castillo 
viejo  de  San  Telmo  sin  que  se  lo  pudiésemos  estorbar,  en  el 
cual  hay  poca  defensa ,  y  alojado  una  vez  en  este  sitio  de  San 
Telmo ,  tampoco  le  podíamos  echar  del  sin  los  inconvenientes 
dichos ,  y  temiéndome  dellos  había  yo  dado  cuenta  á  S.  M. 
deste  particular,  advirtiéndole  que  no  estando  la  fortifica- 
ción en  estado  que  en  bajo  della  se  pudiese  asegurar  ningún 
número  de  gente ,  tenia  por  degollada  cuanta  allí  se  dejase, 
y  el  último  correo  que  he  dicho  me  trujo  respuesta  desla  car- 
ta, diciéndome  S.  M.  que  en  tal  caso  se  contentaba  que  el 
maestre  y  yo  determinásemos  lo  que  mas  conviniese ,  y  ansí 
nos  juntamos  él  y  yo  á  tratar  del  negocio,  y  fuimos  de  pare- 
cer que  no  cumplía  hallándose  la  isla  en  el  estado  en  que  es- 
taba poner  allí  nuevo  golpe  de  gente ,  del  cual  parecer  fue- 
ron Ascanio  de  la  Coma  y  Cabrio  Cervellon ,  y  todos  los  del 
Consejo  del  maestre ,  y  este  juicio  suyo  y  nuestro  hallándose 
como  digo  la  isla  en  el  término  que  estaba ,  era  claro  que 
había  de  ser  ansí.  El  mal  ha  sido  no  haber  puesto  mano  en 
la  obra,  y  este  ha  traído  consigo  todos  los  inconvinientes  que 
después  han  sucedido  y  sucederán.  Aunque  creo  que  Dios 
los  ha  de  remediar  con  no  traer  este  año  por  acá  el  armada 
aunque  esperanza  que  no  quisiera  yo  ver  que  nos  fiáramos 
en  ella,  y  prometo  á  V.  S.  que  si  no  fuera  poner  claramente 
al  cuchillo  los  doce  mil  hombres  ó  los  mas  que  allí  queda- 
ran, de  lo  cual  redundara  tanto  notabilísimo  daño,  que  yo 
mostraré  claro  á  los  que  quieren  fingir  de  cerrar  los  ojos  por 
no  verlo ,  cuan  fácil  cosa  era  poner  á  tiempo  todo  lo  que 
S.  M.  ha  mandado  de  gente  y  vituallas;  pero  al  fin  no  me 
pareció  que  por  declaración  de  cosa  tan  sabida  se  pusiese 


230 

en  perdición  tanto  número  de  gente,  y  pues  Iras  tan  grandes 
obras  como  las  pasadas ,  hay  gentes  que  dudan  de  lo  pre- 
sente ,  paréceme  que  no  habrá  palabras  que  basten  á  satis- 
facer á  quien  no  las  quiere  oir. 

Espantádome  ha  que  lleguen  estas  cosas  á  términos  que 
osen  informar  dellas  á  Su  Santidad,  al  cual  escribo  la  que 
va  con  esta.  Suplico  á  V.  S.  111.™"  la  vea  y  se  la  mande  dar 
y  informar  de  todo  lo  dicho  en  esta  y  en  las  pasadas.  Digo  lo 
que  mas  pareciere  convenir ,  y  suplicarle  que  no  se  canse  de 
oirlo  pues  lo  tengo  yo  de  hacer  de  servirle ,  y  la  gente  que 
Su  Santidad  daba,  podrá  según  esta  determinación  excusar 
V.  S.  de  solicitarla. 

Si  San  Telmo  y  Sanlangel  fueran  capaces  de  recibir 
dentro  mas  gente  de  la  que  el  maestre  tiene  designada  y  le- 
vantada para  la  defensa  dellos ,  diérasele  de  la  de  S.  M.  toda 
la  que  quisiera  para  ellos;  pero  á  mi  juicio  no  podrá  entrar 
dentro  número  que  pase  de  dos  mil  hombres,  ni  aun  que  lle- 
gue á  ellos  por  mucho  que  los  quieran  apretar.  Esta  deter- 
minación ha  parecido  al  maestre  y  á  nosotros  que  se  tenga 
callada ,  porque  llegue  lo  mas  tarde  que  se  pudiere  á  las  ore- 
jas de  los  enemigos. 

Escríbeme  S.  M.  que  en  lo  que  toca  á  la  Goleta,  si  pa- 
reciere que  para  el  fuerte  que  han  de  hacer  los  doce  mil 
hombres,  si  la  empresa  fuese  grande  y  pareciese  no  poderse 
acabar,  que  deja  esto  al  juicio  de  los  que  acá  estamos,  por- 
que considera  que  estando  sobre  el  hecho  se  tomará  la  de- 
terminación que  mas  convendrá;  ya  V.  S.  111.™^  sabe  en  esto 
mi  opinión.  Goníirmarme  he,  ó  retirarme  he  della  estando 
sobre  el  sitio,  y  daré  noticia  á  V.  S.  111.™*  de  todo. 

Y  no  obstante  que  lo  de  la  Goleta  no  se  haya  de  hacer, 
pasaré  á  Genova  por  solo  traer  á  mi  Sra.  Doña  Gerónima  ,  y 
de  allí  daré  orden  en  lo  que  se  hubiere  de  hacer  de  la  gente 


25i 

levaulada ,  lo  cual  se  podrá  hacer  con  mas  luz ,  por  tener 
por  cierto  que  hallaré  allí  respuesta  de  otras  cartas  que  ten- 
go escripias  á  S.  M.  Partí  á  los  siete  de  Malta,  y  llegué  aquí 
á  los  nueve:  hallé  las  galeras  despachadas,  y  si  los  tiempos 
me  lo  hubieran  concedido  me  hubiera  partido,  aunque  no  es 
llegado  D.  Sancho  de  Palermo,  el  cual  lo  hará  dentro  de  seis 
horas  como  el  tiempo  abonance. 


Carta  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo.  Ma- 
drid o  de  mayo  de  1566. 

Dice  que  envía  para  la  Goleta  cuatrocientos  quintales  de  pólvora. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar,  y  visorey  y  capitán  general  en  el  reino  de  Sicilia :  En 
las  galeras  del  cargo  de  D.  Alvaro  de  Baían  hemos  manda- 
do llevar  de  Málaga  cuatrocientos  quintales  de  pólvora  para 
ayuda  á  la  que  será  menester  para  la  gente  que  hobiere  de 
saltar  en  tierra  con  el  prior  D.  Hernando  de  Toledo  en  la  Go- 
leta; y  se  ha  ordenado  al  dicho  D.  Alvaro  que  no  gaste  ni 
loque  en  la  dicha  pólvora  si  no  fuere  para  lo  que  vos  ó  el  di- 
cho prior  ordenáredes.  De  que  os  hemos  querido  dar  aviso 
para  que  si  el  dicho  prior  no  hobiere  de  saltar  en  tierra  por 
cesar  la  necesidad  de  la  dicha  Goleta,  proveáis  que  no  se  to- 
que en  la  dicha  pólvora  sino  que  se  guarde  para  los  otros 
efectos  que  sabéis  que  es  menester  de  presente ,  que  en  ello 
nos  haréis  mucho  placer.  De  Madrid  á  o  de  mayo  de  1566 
años — -Yo  el  Rey — Vázquez  de  Salazar. 


232 


Sobre. — Al  Ule.  D.  Gcarcía  de  Toledo  nuestro  capitán 
general  de  la  mar,  visorey  y  capitán  general  en  el  nuestro 
reino  de  Sicilia. 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo,  fecha  en 
Madrid  áSi  de  mayo  de  1566. 


Noticias  de  la  armada  turca — Aprueba  su  viaje  á  Malta — Ar- 
tillería— Cuentas — Trigo— Compra  de  galeras  y  esclavos  —  Pro- 
visiones— Coronelía  de  D.  César  de  Ñapóles. 


(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medlnasidonia. 
El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Sicilia  :  Vuestras  cartas  de  xvi  y  xxvi  de 
marzo  he  recibido  y  el  duplicado  de  la  primera  con  los  avi- 
sos que  tcníades  dd  levante,  por  los  cuales  y  las  otras  copias 
y  relaciones  que  enviáis  se  entiende  que  el  turco  no  armará 
este  verano  mas  de  ciento  ó  cient  y  veinte  galeras  para  guar- 
da de  sus  tierras  por  hacerlo  tan  gruesa  y  poderosamente 
por  tierra,  que  seria  lo  mejor,  así  por  la  seguridad  de  Malla 
y  la  Goleta  y  que  se  pudiesen  forlificar  conforme  á  lo  que 
está  trazado  y  designado,  como  porque  se  pudiere  efectuar 
lo  que  os  escribimos  en  carta  aparte  á  veinte  y  cinco  del  di- 
cho mes  de  marzo.  Avisarnos  heis  de  lo  que  mas  hubiéredes 
entendido,  y  trujieron  las  dos  fragatas  que  enviastes  á  le- 
vante ,  lo  cual  fué  acertado  por  saber  lo  cierto  y  seguro. 

Muy  bien  me  parece  la  determinación  que  leníades  de 
partiros  luego  á  Malla  con  diez  galeras  y  ver  juntamente 


235 

con  las  personas  que  escribís  la  dispusicion  y  forma  que  po- 
dría tenerse  en  la  forlificacion  del  monle  de  San  Telmo  y 
alojamiento  de  la  gente  que  allí  ha  de  ir ,  pues  se  os  repre- 
sentaban tantas  dificultades ,  así  en  esto  como  en  la  defensa 
de  aquella  isla,  y  de  cualquier  manera  es  bien  que  se  ponga 
en  ella  toda  la  infantería  española  y  alemana  que  os  habe- 
rnos scripto,  que  enviando  Su  Santidad  la  que  ha  ofrecido, 
como  lo  creemos ,  y  juntando  la  orden  la  que  faltare  á  cum- 
plimiento de  doce  mil  infantes ,  todavía  parece  debe  pasar 
adelante  lo  que  está  acordado ,  y  (¡ue  no  habría  tiempo  ni 
forma  para  poderse  hacer  mas  provisión ,  porque  no  seria 
razón  ni  cosa  conviniente  que  se  desamparase  lo  de  la  Go- 
leta siendo  de  tan  gran  importancia,  y  estando  en  duda  sobre 
cual  de  estas  plazas  irá  la  dicha  armada  en  caso  que  baje, 
como  aun  podría  ser  juntando  los  navios  de  levante  y  po- 
niente ;  y  del  estado  en  que  hubíéredes  dejado  lo  de  Malta 
y  resolución  con  que  el  maestre  quedó  nos  avisareis ,  pues 
con  haber  ya  sabido  lo  que  de  nuevo  mandamos  proveer,  y 
con  vuestra  ida  tengo  por  cierto  no  habrá  hecho  mudanza, 
no  embargante  lo  que  á  este  propósito  os  dijo  el  comendador 
Burgués.  También  me  satisface  la  orden  que  pensábades  te- 
ner en  el  conducir  y  trafagar  de  la  dicha  gente  y  de  las  vitua- 
llas, y  que  de  camino  pasásedes  por  la  Goleta  y  reconociésedes 
juntamente  con  los  ingenieros  y  personas  que  escribís  aque- 
lla plaza  y  los  sitios  que  se  deben  fortificar  y  tomar  para  que 
sin  perder  tiempo  se  comenzase  hacer.  Y  pues  esto  y  haber 
ya  enviado  de  Sicilia  los  cienty  cincuenta  gastadores  y  cua- 
renta muradores  que  de  nuevo  os  pidió  el  Fratin  estará  efec- 
tuado, no  hay  que  tratar  sino  creer  que  lo  dejaríadcs  todo 
como  mas  conviniere  á  nuestro  servicio  y  á  la  seguridad  de 
aquella  plaza ,  de  lo  cual  esperamos  vuestro  aviso ,  y  por 
este  respecto  hicisteis  bien  avisar  al  prior  para  que  os  espe- 
rase en  Genova  hasta  que  Uegásedes  allí. 


234 

He  visto  lo  que  decís  cerca  de  lo  que  os  parece  se  debria 
hacer  este  verano  en  caso  que  la  armada  no  bajase ,  ó  ya 
que  lo  hiciese  no  trujiese  mas  número  de  cient  galeras ;  y 
pues  por  mi  último  despacho  veríades  lo  que  cerca  desto  ha- 
bernos resuelto  y  determinado ,  quedamos  esperando  vuestra 
respuesta  ,  y  entretanto  acá  se  hacen  con  toda  diligencia  y 
cuidado  las  provisiones  de  vituallas ,  artillería  y  municiones 
conforme  á  la  relación  que  se  os  envió ,  y  tengo  por  cierto 
que  lo  mismo  habréis  hecho  y  hacéis  allá. 

Por  la  carta  de  xxv  de  marzo  os  escribí ,  como  habréis 
visto ,  que  los  treinta  mili  ducados  que  proveímos  para  la 
fortiücacion  de  iMalta  se  habían  de  enviar  aunque  el  maestre 
se  saliere ,  para  que  se  distribuyesen  de  la  manera  que  es- 
taba acordado,  y  también  los  veinte  mili  de  las  vituallas  y 
municiones ,  y  así  remitiéndome  á  ello  no  hay  que  replicar  á 
lo  que  de  nuevo  apuntáis ,  sino  que  no  habrá  para  qué  usar 
de  la  obligación  que  el  comendador  Burgués  os  hizo  de  que  se 
os  volverían  los  diez  mil  de  las  vituallas  que  le  hicisteis  en- 
tregar en  caso  que  fuese  así  nuestra  voluntad. 

La  nao  que  se  esperaba  de  Laredo  con  el  artillería ,  y  la 
que  se  sacó  del  Peñón,  que  lleva  las  piezas  que  veréis  por 
esa  relación ,  partirá  con  brevedad  con  doscientos  infantes 
que  irán  en  su  guarda.  Irá  derecha  á  Mesina,  porque  si  pa- 
sase adelante  lo  de  la  dicha  armada  esté  á  propósito,  y  sino 
desde  allí  la  podréis  traer  con  vos ,  con  lo  cual  habrá  buen 
recado ,  y  así  no  será  necesario  lo  que  se  pedia  á  los  duques 
de  Saboya  y  Florencia  y  señoría  de  Genova,  que  se  excusa- 
ron por  la  orden  que  habréis  entendido,  ni  la  del  duque  de 
Ferrara,  que  aunque  la  dé  no  podría  servir  ni  venir  á  tiem- 
po, habiéndose  de  traer  por  tierra  y  camino  tan  largo,  ó 
embarcarla  por  el  mar  Adriático. 

A  D.  Alvaro  de  Bazan  se  ha  dado  toda  la  priesa  posible 
en  su  partida ,  y  salió  del  puerto  de  Santa  María  á  los  xv  de 


255 

abril,  y  con  el  tiempo  contrario  volvió  al  rio  de  Palos,  y 
aunque  no  tenemos  otro  aviso  suyo,  creemos  que  con  el 
que  después  ha  hecho  habrá  seguido  su  viaje. 

La  relación  del  dinero  que  el  año  pasado  se  gastó  en  el 
armada  nos  enviareis  desde  Genova,  como  decís,  donde 
creo  os  tomará  este  despacho.  Y  paréceme  muy  bien  la  or- 
den que  disteis  para  que  á  las  galeras  se  trujiesen  allí  las 
treinta  mili  hanegas  de  trigo  que  escribís,  pues  llegarian  á 
tiempo  para  el  efecto  que  últimamente  os  escribimos»  y 
cuando  no  se  beneficiarian  en  ello  los  quince  ó  diez  y  seis 
mil  ducados  que  apuntáis. 

Y  porque  en  el  Principado  de  Cataluña  se  ha  de  juntar 
hasta  setenta  scorchapines  para  cargarlos  de  vituallas ,  mu- 
niciones y  otras  cosas ,  porque  se  puedan  varar,  y  irán  di- 
vididos á  Malaga  y  Cartagena ,  y  como  sabéis  han  de  andar 
y  trafagar  de  unas  partes  á  otras  estos  y  otros  navios ,  sin 
poderse  excusar ,  y  estarían  muy  subjetos  á  recibir  daño  de 
los  enemigos ,  especialmente  habiendo  como  han  comenzado 
á  salir  navios  de  Argel ,  que  es  de  creer  engrosarán  mas ,  y 
esto  seria  de  gran  inconveniente,  como  podréis  juzgar,  con- 
verná  que  en  todo  caso  hagáis  luego  venir  acá  una  buena 
banda  de  galeras  para  la  seguridad  de  todo ,  pues  ya  lerneis 
sabido  y  entendido  lo  cierto  de  lo  que  hará  la  dicha  armada, 
y  para  en  caso  de  duda  nos  ha  parecido  que  todavía  vaya  el 
dicho  Don  Alvaro ,  y  también  porque  sus  galeras  no  serian 
parte  para  lo  sobre  dicho,  antes  podrían  correr  peligro ,  y  los 
dichos  scorchapines  no  saldrán  de  Cataluña  hasta  fin  deste 
raes  ó  principio  de  junio. 

El  duque  de  Alcalá  nos  ha  scripto  que  de  la  artillería 
que  de  aquel  reino  se  llevó  para  la  jornada  de  los  Gelbes 
quedaron  y  están  en  Sicilia  seis  cañones,  y  porque  hace  ins- 


236 

tancia  para  que  se  le  vuelvan ,  y  tiene  razón ,  os  encargo 
que  así  lo  hagáis  y  proveáis  luego  ó  pasada  esta  ocasión, 
si  agora  los  hubiésedes  menester. 

Las  cuatro  galeras  de  Adán  Centurión  habernos  tenido 
por  bien  que  se  pasen  en  Lucian  Centurión ,  y  que  las 
traiga  á  nuestro  sueldo,  poniendo  persona  suficiente  que 
ande  en  ellas  por  ser  su  sobrino  y  tener  hacienda  en  estos 
reinos ,  que  aunque  conforme  á  lo  que  os  parece  quisiéra- 
mos comprar  estas  y  las  de  los  Lomelines,  concurrien- 
do tantos  gastos  en  un  mismo  tiempo  no  se  puede  hacer 
por  agora ,  y  solamente  habemos  mandado  tomar  las  dos  de 
Stefano  de  Mari  por  estar  también  armadas  de  forzados  y 
sclavos ,  los  cuales  se  podrán  repartir  entre  otras  para  po- 
nerlos mas  en  orden ;  y  enviamos  á  mandar  al  visorey  de 
Ñapóles  que  las  haga  visitar  y  tasar ,  como  se  acostumbra, 
y  que  lo  que  montaren  se  le  sitúe  en  renta  sobre  las  mismas 
consignaciones  que  tiene.  Si  viérades  que  conviene  adver- 
tirle de  algo  cerca  desto,  hacerlo  heis. 

Y  en  lo  de  las  dichas  galeras  de  los  Lomelines  acá  ha 
parecido  que  no  se  deben  comprar  al  presente  por  las  cau- 
sas que  arriba  se  refieren ;  pero  tenemos  por  bien  que  se  les 
continúe  su  asiento  y  anden  á  nuestro  sueldo ,  y  el  dinero 
que  escribís  pensáis  sacar  de  las  tratas  desle  año ,  mirareis 
si  podrá  aprovechar  y  servir  para  los  gastos  desta  jornada, 
pues  son  tan  grandes  y  han  de  durar  tanto  tiempo,  y  las 
necesidades  de  acá  tan  crecidas. 

El  proveedor  Francisco  de  Arrióla  nos  ha  enviado  el  me- 
morial que  será  con  esta  señalado  de  Eraso,  suplicándonos 
que  porque  él  ha  tenido  y  tiene  muchos  ayudantes  para  el 
ejercicio  de  su  cargo,  y  con  el  salario  que  se  le  señaló  no 
se  puede  enlrelener,  lo  mandásemos  remediar,  y  por  eslar 


257 

vos  allá  presente  que  sabéis  lo  que  en  eslo  pasa,  holgaré  que 
me  escribáis  lo  que  os  pareciere  ser  justo  y  razonable ,  de 
manera  que  no  reciba  agravio. 

También  se  nos  ha  suplicado  por  parte  de  Andrés  de 
Alba,  nuestro  teniente  de  veedor  general  de  las  galeras,  tu- 
viésemos por  bien  de  mandar  se  le  paguen  enteramente  los 
cuatrocientos  que  le  señalamos  de  salario  con  el  dicho  car- 
go, porque  por  habérsele  consignado  los  docientos  dellos  en 
el  pagador  de  las  galeras  de  Spaña  y  no  haberle  al  presente, 
se  le  dejan  de  librar ,  y  solamente  se  le  pagan  los  docientos 
que  se  le  consignaron  en  el  subsidio ,  y  porque  es  justo  sea 
satisfecho  de  lo  uno  y  lo  otro  conforme  á  su  titulo,  daréis  or- 
den que  de  cualquier  dinero  que  se  proveyere  ó  aplicare  para 
las  galeras  que  están  á  vuestro  cargo ,  se  le  pague  lo  corri- 
do de  los  otros  docientos  escudos  hasta  agora  y  lo  que  mas 
hubiere  de  haber  por  el  tiempo  que  sirviere  el  dicho  oQcio, 
no  embargante  que  no  haya  pagador  particular  dellas ,  sin 
que  tenga  necesidad  de  ocurrir  acá  mas  sobre  ello. 

Eraso  nos  hizo  relación  de  lo  que  le  escribistes  cerca  de 
los  cincuenta  esclavos  que  traéis  en  nuestras  galeras,  y  visto 
que  son  tan  útiles  y  prácticos,  es  nuestra  voluntad  que  se  os 
compren  y  que  D.  Joan  de  Villarroel  los  vea,  visite  y  aprecie 
juntamente  con  la  persona  que  de  vuestra  parte  se  hubiere 
de  hallar  en  ello,  y  que  si  no  se  concertaren,  tomen  un  ter- 
cero como  se  suele  hacer,  y  que  de  lo  que  montaren  os  den 
certificación  en  forma  firmada  de  sus  nombres  para  que  se 
os  paguen. 

A  Joan  Andrea  haréis  dar  un  buque  de  los  que  hubiere 

hechos  en  Genova  ó  otra  parte  que  os  pareciere ,  sin  llevarle 

nada  por  él,  de  que  dice  tiene  mucha  necesidad  para  mudar 

una  galera  de  las  suyas  por  nos  servir  con  ellas  este  verano. 

Yo  escribo  al  duque  de  Alburquerque  y  á  los  otros  mi- 


258 

nistros  lo  que  veréis  por  las  copias  de  sus  cartas  que  van 
con  esta ,  cerca  de  lo  que  toca  á  las  provisiones  que  cada 
uno  ha  de  hacer,  de  que  os  hemos  querido  advertir  para; 
que  todo  lo  tengáis  entendido  y  conforme  aquello  proveáis  y 
ordenéis  lo  que  viéredes  convenir  y  ser  necesario. 

Cuanto  á  la  fortificación  de  la  misma  fuerza  de  la  Goleta, 
yo  tengo  por  cierto  que  haríades  recoger  todos  los  materiales 
y  otras  cosas  que  hablan  de  ir  para  allá,  y  lo  llevaríades  con 
vos  para  que  se  comenzase  á  poner  mano  en  la  obra ,  ha- 
biéndolo todo  mirado  y  considerado  juntamente  con  el  Fratin 
y  las  otras  personas  que  escribís ,  y  que  lo  habréis  proveido 
y  dado  orden  que  aquello  se  continúe  y  haga  con  toda  dili- 
gencia y  cuidado,  pues  sabéis  lo  que  importa  la  brevedad. 

Yo  he  entendido  que  la  coronelía  de  Gésaro  de  Ñapóles 
está  muy  deshecha,  y  porque  conviene  que  se  torne  á  reha- 
cer y  cumplir  el  número  de  los  cuatro  mili  infantes  que  ha 
de  tener ,  proveeréis  que  así  se  haga  en  la  parte  que  os  pa- 
reciere ser  mas  á  propósito  para  que  la  gente  sea  buena  y 
se  pueda  embarcar  fácilmente ,  y  que  del  dinero  que  allá 
hay  se  envíe  el  que  fuere  menester  para  los  que  de  nuevo 
se  han  de  levantar ,  á  los  cuales  se  les  tomará  la  muestra  y 
se  harán  sus  listas  en  forma,  que  por  cierto  tenemos  que  es- 
to no  será  causa  para  deteneros  mucho. 

Por  la  copia  de  la  carta  del  embajador  de  Genova  veréis 
el  dinero  que  de  nuevo  se  mandó  remitir  y  para  lo  que  es. 
Conforme  aquello  haréis  que  se  cobre ,  gaste  y  distribuya  lo 
que  ha  de  estar  á  vuestra  dispusicion ,  porque  así  conviene  á 
nuestro  servicio  para  que  no  haya  falta  especialmente  en  la 
paga  de  la  infantería. —  De  Madrid  á  9  de  mayo  de  mdlxví 
años. — Yo  el  Rey. — Francisco  de  Eraso. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. 


259 


Carla  autógrafa  del  secretario  Francisco  de  Eraso  á  don 
García  de  Toledo.  Madrid  12  de  mayo  de  156G. 

Dice  que  en  la  corte  se  han  maravillado  mucho  que  se  trate  de 
desamparar  á  Malta  y  que  no  basten  para  defenderla  doce  mil  hom- 
bres —  Sentencia  sobre  la  visita. 

{Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Muy  nie.  señor:  Las  cartas  de  V.  S.  de  25,  26  y  11  de 
abril  pasado  he  rescibido ,  y  el  Rey  nuestro  señor  ha  visto  las 
que  V.  S.  le  ha  escripto,  y  entendido  por  ellas  particular- 
mente lo  que  se  ha  hecho  y  proveído  en  lo  de  Malta ,  y  lo 
que  V.  S.  pensaba  hacer  cerca  desto  y  la  Goleta,  sobre  que 
se  ha  tratado  bien  largo  y  lo  que  podrá  hacer  la  armada ,  y 
paresciendo  que  poco  efecto  este  año  segund  los  avisos  hay, 
se  resolvió  lo  que  Y.  S.  habrá  visto  por  los  despachos  últi- 
mos que  se  han  enviado ,  y  esperamos  cada  hora  la  respues- 
ta con  aviso  cierto  de  lo  del  armada  y  del  parescer  de  V.  S. 
sobre  todo,  que  sé  yo  será  el  mas  acertado. 

Y  cuanto  á  los  negocios  S.  M.  escribe  tan  largo  que  no 
temé  que  decir  de  nuevo  sino  que  lo  que  toca  á  V.  S.  me 
paresce  que  lo  va  S.  M.  desimulando  como  hace  todas  las 
cosas,  que  aunque  gelo  he  acordado  diversas  veces  por  el 
camino  y  modo  que  me  ha  parescido  mas  convenir  no  se  ha 
acabado  de  resolver;  pero  yo  espero  que  no  podrá  dejar  de 
hacer  lo  que  es  razón.  Estando  despachando  este  correo  lle- 
gó la  carta  breve  que  V.  S.  escribió  después  de  haber  esta- 
do en  Malta ,  y  acá  ha  maravillado  mucho  que  se  trata  de 
desamparalla  y  que  no  basten  para  defenderla  doce  mil  in- 
fantes no  podiendo  ser  el  armada  del  turco  tan  gruesa  como 


la  del  año  pasado,  y  habiéndose  proveido  lo  que  V.  S.  sabe 
para  lo  de  las  vituallas  y  municiones ,  y  espérase  con  gran 
deseo  otros  despachos  de  V.  S.  para  entender  mas  particu- 
larmente lo  que  hay,  así  en  esto  como  en  lo  de  la  Goleta  y 
en  el  otro  negocio  principal  sobre  que  le  ha  escrito  cá  V.  S. 
yenviádolc  relación,  y  entonces  se  responderá  á  V.  S.  mas 
particularmente  con  otro  correo  que  se  despachará. 

Ya  quiso  Dios  que  saliese  mi  visita  que  como  haya  aca- 
bado estoy  muy  contento.  Ello  se  hizo  como  se  esperaba  de 
los  jueces  y  de  la  intención  que  han  tenido  juntamente  con 
los  otros  que  han  concurrido  en  la  máquina.  Y  á  S.  M.  pá- 
reselo bien  repartir  mis  oficios  de  la  hacienda ;  y  cierto  si 
lo  hiciera  cuando  y  por  el  camino  que  ha  muchos  dias  que 
gelo  supliqué ,  yo  estoviera  muy  contento,  porque  ha  sido 
sacarme  del  infierno  y  tener  algún  mas  descanso  y  no  tan- 
to fastidio,  y  estar  por  esta  causa  enemistado  con  todos.  De 
lo  que  quedo  muy  satisfecho  es  que  mis  enemigos,  con  todas 
las  diligencias  infernales  que  han  hecho  por  el  mundo ,  no 
han  podido  sacar  que  haya  tomado  (1) 

ni  á  S.  M.  un  real  en  25  años  que  me  visitan,  y  en 
cuarenta  millones  que  han  pasado  por  mis  manos,  ni  me 
han  mandado  resitiluir  un  maravedí  á  ningún  particular,  ni 
hay  en  la  visita  quien  me  le  pida.  Y  es  muy  bueno  que  han 
hecho  mucho  caso  de  lo  de  Monfernando  y  la  compra  que 
hice  habiéndolo  consultado  á  S.  M.  los  del  Consejo  de  Ha- 
cienda ,  y  teniendo  carta  y  licencia  de  S.  M.  para  ello ,  y 
habiendo  otorgado  y  firmado  la  venta ;  y  por  esto  me  han 
condenado  en  doce  mil  ducados  por  una  vez  y  en  suspen- 
sión por  un  año  del  Consejo  de  Hacienda.  Y  la  fineza  ha  si- 
do que  en  la  sentencia  no  han  querido  declarar  porque  me 

(1)  Aquí  hay  unas  palabras  que  no  se  pueden  leer. 


244 

cíindenan  sino  á  humo  muerto  decir  que  por  lo  que  resulla 
de  la  visita.  Ea  todo  y  cu  su  manera  de  proceder  se  ha  co- 
noscido  la  gran  pasión  que  han  tenido ,  y  así  lo  entienden 
los  que  son  mis  amigos  y  enemigos,  y  que  S.  M.  ha  premitido 
una  cosa  que  lo  pudiera  bien  excusar,  sin  tener  respeto  á  lo 
que  he  servido  y  trabajado  de  tantos  años  á  esta  parte  por 
mar  y  tierra,  trayendo  á  cuestas  sus  ejércitos  y  otras  muchas 
importunidades.  Yo  no  pediré  á  Dios  venganza ;  pero  yo  espe- 
ro en  su  misericordia ,  que  de  sí  propio  lo  castigará  y  mani- 
festará tan  gran  maldad ,  que  ya  me  ha  llevado  al  otro  mundo 
nueve  enemigos  capitales,  y  en  los  declarados  y  disimula- 
dos tengo  por  cierto  hará  demostración.  Yo  pienso  enviar 
á  V.  S.  la  copia  de  mis  cargos  para  que  vea  lo  que  resulla 
contra  mí ,  que  mis  letrados  me  han  certificado  que  segund 
de  la  manera  que  se  ha  procedido  contra  mí  me  podían  traer 
por  medalla.   Y'o  me  fui  á  Monhernando  cuando  subcedió 
este  rayo,  y  S.  M.  me  mandó  volver  aquí,  y  no  pude  de- 
jar de  obedescerle;  pero  visto  el  subceso  que  tienen  las  co- 
sas miraré  en  lo  que  me  cumple.  Déjame  S.  M.  lo  del  Con- 
sejo de  Hacienda  ,  lo  de  la  Guerra  y  Estado,  lo  de  la  Cámara 
é  Indias  y  Ordenes ,  que  es  mas  de  lo  que  quería.  Suplico 
á  V.  S.  me  avise  de  lo  que  le  paresce  que  debo  hacer,  pues 
habrá  tiempo ,  porque  esto  terne  por  lo  mas  acertado  y  será 
mi  gobernalle.  Doña  Mariana  y  mis  hijos  quedamos  buenos 
y  todos  besan  las  manos  á  V.  S.  muchas  veces,  cuya  muy 
ilustre  persona  y  estado  Nuestro  Señor  guarde  y  conserve 
como  desea.  De  Madrid  xu  de  mayo  1566.  —  Besa  las  ma- 
ñosa V.  S.  su  cierto  servidor. — Francisco  de  Eraso. 

Don  Juan  de  Villarroel  desea  que  V.  S.  le  ocupase  y  lla- 
mase á  lo  de  la  guerra  y  otras  provisiones ,  y  yo  lo  supHco 
á  Y.  S.,  y  que  entretenga  aquel  oficio  sobre  que  V.  S.  me 
escribió  para  mi  sobrino. 

Tomo  XXX.  16 


242 

Sobre.  —  Al  muy  Ule.  Sr.  mi  Sr.  D.  García  de  Toledo 
visorey  de  Sicilia  y  capitán  general  de  la  mar. 

Al  otro  lado  del  sobre. — Madrid  1566. — De  Francisco 
de  Eraso  de  xii  de  mayo.  Re.''*  en  Ñapóles  á  úllimo  del. 


Copia  de  carta  de  D.  García  de  Toledo  al  duque  de  Fran- 
cavila,  virey  de  Cataluña.  19  de  mayo  de  1566. 

Le  avisa  su  llegada  á  Genova,  la  presa  de  una  galeota  y  dos 
fragatas  enemigas,  y  la  salida  de  la  escuadra  turca  de  Constanti- 
nopla. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
Illmo.  Señor: 

A  los  X  é  VI  del  presente  llegué  aquí  á  Genova  y  he  tar- 
dado en  la  navegación  porque  he  tenido  tan  contrarios  tiem- 
pos que  me  han  detenido  en  las  costas  de  Berbería  y  Cerdeña 
mas  de  40  días;  pero  gracias  á  Nuestro  Señor  no  subcedió 
ninguna  desgracia,  antes  se  tomaron  una  galeota  y  dos  fra- 
gatas que  no  topé  otro  bajel  en  todo  el  camino.  Hallé  en  esta 
ciudad  dos  cartas  de  V.  S.^,  una  de  23  de  marzo  y  la  últi- 
ma de  6  del  pasado ,  que  vino  por  mar  con  el  duplicado  de 
S.  M.  He  rescebido  con  ellas  muy  grande  merced  y  conten- 
tamiento por  tener  nuevas  de  su  salud  y  de  mi  señora  la 
princesa,  cuyas  manos  beso,  y  siempre  que  V.  S.  me  la  hi- 
ciere en  esto  y  en  enviarme  á  mandar  la  terne  por  muy  gran- 
de. Yo  á  Dios  gracias  me  hallo  con  ella  y  estoy  esperando 
los  españoles  que  vienen  de  Lombardía  para  embarcallos  y 
partirme  la  vuelta  de  Ñapóles  y  Sicilia  por  hallarme  mas  cer- 

*■  //.A    O?/»  ti 


245 

ca  á  lo  que  la  armada  del  turco  pudiese  pretender ,  y  los 
avisos  que  aquí  he  hallado  della  no  los  envío  á  V.  S.'  por- 
que ha  muchos  dias  que  me  esperaban  la  carta  y  tengo  no-^ 
ticia  que  el  señor  virey  de  Ñápeles  los  habrá  enviado,  y  di- 
cen que  salió  de  Conslantinopla  á  los  xxx  de  marzo.  De  lo 
que  se  supiere  della  y  de  cualquiera  otra  cosa  que  se  ofres- 
ciere,  daré  siempre  aviso  á  V.  S.^,  cuyas  manos  beso  por  la 
merced  y  favor  que  ofresce  hacer  al  doctor  M.  Serra ,  que  lo 
estimo  yo  en  mucho  por  ser  tan  buen  servidor  de  S.  M.  y 
aficionado  de  sus  ministros,  y  ansí  suplico  de  nuevo  a  Y.  S. 
que  persevere  en  honrarle  y  favorescerle. 

Este  correo  despacho  á  S.  M.  con  mucha  diligencia  por 
cosas  que  cumplen  mucho  á  su  servicio.  Suplico  á  V.  S.* 
que  le  mande  despachar  de  ahí  con  toda  la  brevedad  que  se 
pudiere,  y  beso  las  manos  á  V.  S.'*  por  la  memoria  que  tuvo 
de  escribir  al  secretario  Eraso  sobre  lo  del  árbol  y  lo  demás. 

Al  respaldo  se  lee:  Al  duque  de  Francavila,  19  de  ma- 
yo de  1566. 


Carta  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M.,  fecha  en 
Genova  á  20  de  mayo  de  1566. 

Discúrrese  sobre  los  inconvenientes  de  hacer  la  empresa  de 
Argel. 

(Archivo  general  de  Simancas.— Estado,  legajo  núm.  ííoO.J 

Cat."  Real  íMaj." 

Aquí  en  Genova  llegué  con  determinación,  si  ansí  pare- 
ciese al  prior  D.  Hernando,  de  despedir  toda  esta  infantería 
tudesca  é  italiana,  pareciéndome  que  cesando  lo  de  Malta  y 
de  la  Goleta,  ni  siendo  menester  para  la  defensa  del  reino  de 


244 

Ñapóles  ni  Sicilia,  que  no  habia  para  que  Iiacer  lan  nolable 
gasto ,  tanto  mas  no  siendo  los  tudescos  gente  para  la  mar, 
ni  habiendo  menester  para  ella  tanto  número ,  y  para  poder- 
lo hacer  con  tiempo  me  he  dado  en  el  viaje  toda  la  mas 
priesa  posible  como  largamente  lo  digo  en  la  que  con  esta 
va;  pero  no  ha  bastado  mi  deseo  á  poder  contrastar  contra 
el  tiempo  que  me  lo  ha  estorbado,  lo  cual  ha  sido  causa  de 
no  poder  recibir,  hasta  los  16  del  presente  que  llegué  aquí, 
el  despacho  de  V.  M.  de  los  26  de  marzo,  y  el  duplicado  del 
llegó  por  mar  á  los  28  del  mismo ,  y  he  visto  por  él  el  sancto 
celo  y  intención  que  V.  M.  tiene  en  la  ejecución  de  la  em- 
presa de  Argel ,  y  holgara  mucho ,  por  ser  uno  de  los  mas 
inclinados  á  que  V.  M.  la  haga,  pareciéndome  cumplir  mu^ 
cho  á  su  servicio,  de  hallar  tanta  facilidad  en  ella,  cuanta 
veo  dificultad.  Y  por  mandarme  V.  M.  que  diga  lo  que  en 
ello  me  ocurre ,  lo  haré  con  la  mayor  brevedad  que  pudiere, 
y  comenzando  por  el  número  de  la  gente ,  digo  que  con  gran 
parte  no  tengo  por  bastante  el  que  se  señala  de  los  24  mil 
hombres  de  paga  ,  que  de  las  otras  ayudas  de  ventureros 
hago  poca  cuenta ,  no  porque  les  falte  ánimo  para  pelear, 
sino  porque  por  mas  órdenes  que  se  les  dé,  sé  que  cuando  se 
estará  sobre  el  hecho,  se  ternía  por  mas  seguro  quedar  con 
sola  la  gente  del  sueldo ,  salvo  si  estos  ventureros  no  fuesen 
gente  de  á  caballo,  que  en  tal  caso  se  podría  poner  mejor  or- 
den en  ellos  y  serian  mas  útiles.  Los  años  pasados  creo  bien 
que  este  número  bastara;  pero  después  que  el  jarife  y  el  rey 
de  Argel  han  hecho  sus  amistades,  ni  siendo  tanta  la  distan- 
cia de  un  reino  á  otro  que  no  se  puedan  brevemente  juntar, 
tengo  por  firme  que  no  lo  dejarán  de  hacer ,  y  cuando  hay 
grueso  golpe  de  gente  en  campaña  por  mas  que  nos  fortifi- 
quemos tiénese  el  trabajo  que  allá  se  puede  mejor  conside- 
rar, y  no  siendo  la  de  Argel  empresa  de  cuatro  dias,  ni  el  ir 


245 

á  ella  se  puede  encubrir  de  manera  que  el  jarife  y  el  rey 
no  puedan  esperarnos  á  desembarcar  y  darnos  mas  eslorbo 
del  que  para  poca  gente  seria  menester,  certificando  á  V.  M. 
que  si  la  gente  del  jarife  llegara  toda  la  que  venia  al  Peñón, 
como  llegó  parte ,  que  fuera  muy  difícil  la  embarcación ,  no 
obstante  que  teníamos  el  favor  de  la  artillería  de  mar  y  el 
Peñón  que  hacia  lo  mismo,  y  si  es  ansí  quel  número  convie- 
ne ser  mayor,  añádense  mas  dificultades  á  las  victuallas  y 
navios  que  los  han  de  llevar,  y  aun  para  el  número  señala- 
do no  serán  pequeñas  las  que  habrá ,  porque  no  puedo  ase- 
gurarme del  todo  de  ninguna  destas  cosas,  aunque  se  ha- 
rá en  ello  mas  de  lo  que  se  pudiere.  Viendo  que  cesaba  el 
poner  de  la  gente  en  Malta  y  la  Goleta,  escribí  luego  á  Sicilia 
que  alzasen  mano  de  hacer  mas  vituallas  por  no  gastar  el 
dinero  en  ellas  sin  necesidad ,  tanto  mas  que  en  esta  recolta 
pensaba  proveerme  mas  barato  del  trigo  nuevo ,  de  lo  que  lo 
hacia  del  viejo ,  y  por  esta  causa  lo  suspendía  de  mejor  ga- 
na. Otras  provisiones  de  importancia  que  tenia  secrestadas 
de  vino,  aceite,  legumes  y  otras  cosas  necesarias,  por  no 
agraviar  los  dueños  viendo  que  la  necesidad  cesaba,  mandé 
alzar  el  secresto  dellas  y  para  el  armada,  comenzándome  á 
servir  de  las  provisiones  que  cada  dia  se  van  en  ella  co- 
miendo, y  aunque  todo  esto  procuraré  de  remediarlo  con  es- 
cribir luego  en  Sicilia  que  tornen  á  poner  mano  en  ello  y 
con  mayor  deligencia,  y  lo  mismo  haré  en  llegando,  todavía 
no  puedo  asegurar  del  todo  este  particular.  El  lomar  las  i 5 
mil  toneladas  tengo  por  imposible  por  saber  muy  bien  el  tra- 
bajo que  se  pasó  el  año  pasado  en  juntar  las  naves  que  se  to- 
maron, que  fueron  de  poco  mayor  número,  no  obstante  que 
para  ello  hubo  mucho  mas  tiempo  del  que  agora  habrá,  por- 
que hasta  primero  de  setiembre  duró  el  reeogerias  tomándo- 
las de  tiempo  en  tiempo  como  se  ofrescian  las  ocasiones  de 


24G 

poderlas  enconlrar  y  acordar,  sabe  bien  V.  M.  que  esto  se 
comenz(j  á  hacer  desde  los  15  de  marzo,  y  de  haberse  que- 
jado el  turco  de  venecianos  y  ragoseses  de  que  con  sus 
naves  se  le  hacia  la  guerra,  están  tan  recatados  que  no 
envían  en  los  reinos  de  V.  M,  y  tierras  de  sus  confederados 
sino  solamente  aquellos  que  no  pueden  excusar,  y  han  dado 
orden  á  los  demás  que  no  se  muevan  de  sus  puestos.  Demás 
de  lo  dicho  temiendo  que  no  las  secresten  para  la  Goleta  ó 
otros  servicios,  como  se  ha  hecho  estos  dias  pasados,  ó  que 
no  las  detengan  para  armada,  de  lo  cual  les  viene  gran  daño, 
aunque  el  sueldo  sea  crecido,  por  la  grande  ganancia  que 
hacen  en  los  fletes  de  su  mercancía ,  huyen  de  los  lugares 
adonde  pueden  ser  detenidas ,  porque  como  las  naves  han 
faltado ,  dánse  mucho  mayores  á  las  que  quedan  de  lo  que 
solían ,  y  esto  es  de  tal  manera  que  si  no  hubiera  con  harto 
trabajo  enviado  tres  naves  á  Ñapóles  no  pudiera  el  virey  ha- 
ber proveído  lo  que  había  de  ir  á  la  Goleta;  ansí  que  dudo 
muy  mucho  que  se  podría  emprender  cosa  que  después  fal- 
tase lo  principal ,  que  es  el  no  tener  en  que  llevar  la  gente  y 
vitualllas  y  se  quedase  solo  con  el  gasto  que  se  hubiese  he- 
cho sin  podernos  aprovechar  dello. 

El  tiempo  está  muy  adelante,  y  erea  V.  M.  que  primero 
que  se  junte  esta  máquina  comenzándose  tan  tarde  sucede- 
rá una  de  dos  cosas,  ó  dejarla  á  lo  mejor  por  tardía  después 
de  hecho  el  gasto ,  ó  ir  á  tiempo  que  sucediese  lo  que  la 
otra  vez ,  porque  sería  facilísima  cosa  habiendo  de  hacer  la 
navegación  con  naves  que  nos  tomase  una  calmería  que  nos 
tuviese  un  mes  sin  poder  caminar  diez  millas,  y  siendo  la 
navegación  tan  larga,  se  puede  fácilmente  esperar  estay 
otras  dificultades,  la  cual  navegación  es  mucho  mas  fácil  en 
estos  tiempos  de  poniente  á  levante,  porque  en  lo  primero 
ayudan  los  embales  que  son  de  poniente ,  y  en  lo  segundo 


247 

siendo  contrarios  hace  mas  trabajoso  y  largo  el  marinaje ,  de 
manera  que  ya  que  se  saliese  de  las  calmerías  no  se  podria 
rehuir  de  tener  los  vientos  que  ordinariamente  corren  por 
contrarios.  Acuérdese  V.  M.  que  con  haber  encaminado  mas 
temprano  que  agora  y  siendo  la  navegación  sin  compañía  de 
naves,  y  digo  sin  compañía,  porque  las  tomamos  tan  cerca 
que  no  habia  sino  ciento  y  veinte  millas  de  traviesa  para 
ellas ,  y  siendo  el  número  de  la  gente  mucho  menor  y  por 
esta  causa  mas  pequeño  todo  lo  demás ,  llegamos  á  tiempo 
á  hacer  la  empresa  del  Peñón,  que  por  razón  de  marinería 
no  se  podia  ni  debia  ya  emprender,  y  si  esto  se  acierta  una 
vez  fuera  de  tiempo,  por  la  misma  causa  no  se  debe  probar 
dos,  pues  considere  Y.  M.  si  por  esta  causa  del  tiempo^)» 
por  la  de  los  enemigos  como  diré,  sucediese  en  estas  oca- 
siones alguna  desgracia ,  el  daño  que  dello  podria  venir  en 
especial  si  es  verdad  lo  que  por  acá  se  dice  de  las  alteracio- 
nes de  Flándes ,  y  aunque  la  reputación  del  buen  suceso  se- 
ria muy  grande  no  por  esto  creo  que  se  remediaría  el  mal 
de  aquellos  estados,  y  si  hubiese  pérdida  temo  que  no  fuese 
causa  de  acabarlo  de  destruir.  Bien  sabe  V.  M.  que  cuando 
un  ejército  quiere  ir  á  hacer  una  empresa  semejante  basta 
otro  mucho  menor  que  este  en  la  campaña  para  estorbárselo 
y  impedírselo ,  de  manera  que  no  hay  quien  pueda  aperar 
dello  buen  suceso.  Este  mismo  estorbo  hay  en  lo  de  la  mar 
y  de  mucho  mayor  inconveniente,  porque  en  tierra  sábese 
á  donde  está  el  ejército  del  enemigo  y  ansí  se  vée  en  cuan- 
tos dias  puede  venir  encima ,  y  tománse  sitios  y  lugares 
aventajados  con  que  alguna  vez  se  pueden  remediar  estos 
inconvenientes.  En  la  mar  no  se  puede  todas  veces  tener 
certeza  á  donde  está  el  enemigo  ni  por  esto  medir  la  distan- 
cia que  hay  del  un  ejército  al  otro,  cuando  se  piensa  tener- 
le lejos  se  tiene  encima  de  las  popas  ó  proas ,  ni  se  pueden 


2Í-8 

tomar  sillos  ni  aprovecharse  de  oirás  ventajas,  pues  si  sien- 
do el  ejército  menor  hay  los  inconvenientes  dichos,  qué  hará 
siendo  el  armada  mayor  que  la  de  V.  M.,  y  esto  en  tal  nú- 
mero que  aunque  nos  tome  con  toda  la  gente  dentro  no  so- 
inos  bastantes  á  resistirla,  y  de  saberse  en  levante  con  tiem- 
po esta  determinación  no  lo  dude  V.  M.,  certificándole  que 
antes  que  yo  surgiese  en  este  puerto ,  saliéndome  á  recibir 
muchos  amigos  mios  ,  antes  que  en  él  entrase,  me  dijeron 
toda  la  jornada,  y  que  para  ella  habia  llamado  V.  M.  á  Fran- 
cisco de  Ibarra,  y  que  se  habían  dado  sesenta  mil  escudos 
al  proveedor  Verdugo,  y  aun  algunos  me  han  dicho  que  allá 
se  comenzaban  á  hacer  las  provisiones  en  bajo  de  la  misma 
voz  que  V.  M.  me  escribe,  y  en  los  bancos  desta  ciudad  an- 
dan ya  discursos  públicos  sobre  esta  materia,  los  cuales  se 
afirmarán  cuanto  mas  vieren  continuar  lo  que  se  ha  de  pro- 
veer. Ansí  que  temo  que  esta  fama  pública  no  llegue  presto 
á  donde  suelen  llegar  otras  mas  secretas ,  y  que  esto  sea 
causa  de  traernos  encima  el  armada  cuando  bien  no  tuviese 
pensamiento  de  pasar  acá,  y  si  viniese  demás  de  los  daños 
que  á  los  reinos  de  V.  M.  se  le  seguirían ,  si  nos  hallase  en 
el  hecho,  podria  fácilmenle  suceder  el  mayor  daño  do  cuan- 
tos se  pueden  pensar  y  aventurar  tan  grand  hecho  y  tan  im- 
portante á  la  ventura  si  viene  ó  no  viene ,  paréceme  cosa 
digna  de  grandísima  consideración  y  principalmente  por  es- 
ta causa  que  es  á  mi  juicio  la  mas  urgente  no  me  parece  en 
ninguna  manera  que  se  debe  emprender  en  esta  conyuntura; 
y  si  se  juzgase  que  primei'o  que  los  enemigos  vengan  se  ha- 
brá dado  fin  á  la  empresa,  esto  yo  lo  dudo  mucho,  porque 
demás  de  la  fama,  que  como  tengo  dicho  ha  ya  algunos  dias 
que  corre,  habiendo  el  enemigo  de  seguirnos  con  solas  gale- 
ras y  nosotros  navegar  con  compañía  de  naves  aunque  par- 
tiese de  mas  lejos  podria  ser  muy  fácil  cosa  alcanzarnos;  ni 


se  debe  tener  esperanza  en  decir  que  el  enemigo  no  se  me- 
terá tan  adelante  temiendo  el  tiempo  ruin  que  le  podría  ve- 
nir encima  para  su  tornada  á  Gonslantinopla ,  porque  demás 
de  que  podría  tener  amigos  que  en  los  ruines  tiempos  le  die- 
sen invernadero  y  vituallas ,  en  Berbería  hallaría  partes  y 
lugares  á  donde  pudiese  tener  el  invierno  sin  haber  de  tor- 
nar á  donde  salió.  La  cuenta  que  se  hace  de  la  gente  que  ha 
de  quedar  en  Sicilia ,  no  viniendo  el  armada,  sobra:  pero  vi- 
niendo con  muy  gran  parte  no  llega  á  la  que  conviene  que 
allí  quede ,  tanto  mas  que  desabrigara  mucho  aquel  reino  la 
ausencia  del  armada,  y  por  esta  causa  la  provisión  ha  de 
ser  muy  mayor.  De  Nnpoles  no  quiero  hablar  por  que  tenien- 
do quien  lo  gobierna  y  con  lanío  celo  de  no  perderlo,  creo  que 
él  mismo  dirá  á  su  tiempo  lo  que  en  este  caso  hubiere  me- 
nester. La  Goleta  quedará  á  manifiesto  peligro  habiéndosele 
de  sacar  la  gente  que  agora  está  dentro.  Ni  Malta  hará  nin- 
guna ganancia,  porque  el  menos  mal  que  puede  suceder  es," 
que  el  armada  pare  por  estas  parles  lo  que  no  cree ,  sino 
que  dejará  los  miembros  y  vendrá  á  dar  en  la  cabeza. 

En  Cerdeña  también  convendrá  dejar  gruesa  guarnición, 
y  proveídas  Mallorca  y  Menorca.  He  dicho  lo  que  sobre  esta 
materia  me  ocurre,  y  aunque  me  he  alargado  es  harto  me- 
nos de  lo  que  podría  y  debría  segund  el  daño  que  me  pares- 
ce  que  puede  venir,  y  tengo  por  cierto  que  cuando  V.  M. 
sepa  que  las  cartas  escritas  en  26  de  marzo  las  he  recibido 
en  16  de  mayo  y  en  lugar  apartado  de  adonde  habia  de  dar 
la  principal  orden  en  las  vituallas  y  en  lo  demás,  conside- 
rará ser  tardía  esta  determinación ,  y  bien  conozco  que  la 
ganancia  desta  empresa  y  la  necesidad  que  fuerza  á  hacerla 
es  tal  y  tan  grande  que  con  muy  evidente  razón  se  mue- 
ve V.  M.  á  querella  emprender ,  porque  demás  del  servicio 
de  Nuestro  Señor,  beneficio  de  sus  reinos  y  augmento  de  la 


250 

hacienda  es  de  grande  reputación  para  la  real  persona  de 
V.  M.,  porque  con  ella  se  manifiesta  mas  al  mundo  ser  vuel- 
ta su  santa  mente  toda  á  guerra  contra  infieles ,  y  muéstrase 
claro  que  por  solo  el  servicio  de  Dios  se  desea  rehuir  de 
otras  empresas  que  no  tengan  esta  cualidad ,  y  pues  V.  M. 
puede  ejecutar  este  su  santo  celo  haciéndolo  con  la  cautela 
conveniente  en  mejor  ocasión,  y  acautelándose  de  los  in- 
convenientes dichos,  diré  en  este  particular  lo  que  ocurre. 
No  ponga  V.  M.  duda  sino  que  el  verano  que  viene  ha- 
brá la  misma  voz  y  grita  de  la  venida  de  la  armada ,  falsa 
ó  verdadera,  de  la  que  ha  habido  este  año,  y  crea  cierto  que 
hasta  que  se  halle  V.  M.  armado  por  mar  poderosamente, 
como  puede  estarlo  con  solo  el  gasto  que  se  ha  de  sustentar, 
no  cesarán  estas  ocasiones  y  debajo  de  color  de  armarse  V.  M. 
para  la  defensa  se  puede  apercibir  para  la  ofensa;  ni  hay 
que  dudar  que  armándose  cincuenta  galeras ,  como  se  pue- 
de hacer  si  luego  se  comienza  á  preparar,  y  juntándolas 
con  noventa  que  V.  M.  tiene,  y  las  diez  de  Portugal,  aña- 
diéndoles un  conveniente  número  de  naves ,  que  para  tal 
efecto  se  podrían  traer  de  Flándes  y  Vizcaya,  juntándolas  con 
las  carahelas  que  el  rey  de  Portugal  podría  dar  á  su  suel- 
do ó  al  de  V.  M.,  no  dudo  yo  nada  que  esta  jarmada  hecha 
en  bajo  de  solo  nombre  de  defensa  no  sea  bastante  para  en- 
trambas cosas.  La  compaña  de  las  naves  es  muy  ruin  para 
las  galeras  cuando  se  ha  de  ir  á  buscar  al  enemigo ;  pero 
para  esperarle  es  mucho  mas  úlil  y  provechosa  de  lo  que 
podrían  ser  otras  tantas  galeras,   porque  para  surtas  son 
lautos  caballos  queasiguran  cualquier  inconveniente.  En  esta 
armada  podría  poner  el  golpe  de  gente  que  pareciese  con- 
veniente para  tal  empresa.  El  modo,  y  la  manera  y  tiempo 
en  que  se  ha  de  hacer,  no  lo  trataré  aquí  particularmente 
hasta  saber  la  determinación  de  V.  M. 


9M 

Para  este  tiempo  estaría  lo  de  Malta  y  la  Goleta  de  ma- 
nera que  se  pudiese  dejar  atrás  con  mas  quietud  y  aun  para 
lo  de  Sicilia  no  dañara  nada  el  tener  ya  en  perfección  el 
puerto  de  Augusta,  que  procuraré  que  lo  esté  para  tal  tiem- 
po ,  y  aunque  parece  que  agora  se  aventajaba  una  grand 
parte  del  gasto  de  los  tudescos  por  hallarse  levantados ,  y  á 
la  marina  son  tantos  los  inconvenientes  que  no  puede  ser 
contrapeso  dellos  esta  ocasión ,  y  dejando  con  esta  su^en- 
sion  morir  esta  fama  tengo  por  firme  que  aunque  los  apara- 
tos sean  mayores  para  el  tiempo  que  viene ,  pudiéndose  tam- 
bién tomar  ocasión  de  alguna  pasada  de  V.  M.  para  Flándes 
ó  Italia  que  será  con  mas  secreto  de  lo  que  agora  se  baria, 
porque  el  armar  de  las  galeras,  que  es  lo  mas  público,  bien 
saben  que  ha  dos  años  que  V.  M.  manda  fabricarlas,  y  no 
piensan  que  es  para  dejarlas  estar  en  las  atarazanas,  y  yen- 
do esta  empresa  guiada  con  menos  dificultades  ternía  mas 
esperanza  de  buen  fin ,  porque  de  cosas  hechas  arrebatada- 
mente y  con  priesas  raras  veces  salen  buenos  sucesos ,  ni 
se  ha  de  pensar  que  sean  menester  dos  ejércitos ,  uno  para 
tener  sobre  Argel,  y  otro  para  estar  en  la  armada,  porque  de- 
más que  seria  notabilísimo  gasto  seria  estar  flacos  en  ambas 
partes ,  y  en  caso  de  necesidad  lo  de  el  armada  no  ha  de 
estar  remendado  antes  proveído  de  toda  la  flor  que  en  tier- 
ra hubiere:  y  sí  pareciere  que  ha  de  fallar  tiempo  para  la 
embarcncion  en  caso  que  la  armada  compareciese,  esto  que- 
de á  mí  cargo  porque  se  podrán  poner  tantas  guardas  en 
los  lugares  convenientes  para  ser  avisado  desla  particulari- 
dad y  usar  de  tantas  cautelas  para  asegurarnos  deste  temor 
cuales  sean  bastantes  para  no  temer  inconveniente  tan  gran- 
de como  podría  suceder;  y  si  se  dijese  que  destas  diligen- 
cias no  se  debe  fiar ,  que  á  lo  que  entiendo  soy  de  contraria 
opinión,  también  se  ha  de  tener  entendido  que  noscasegu- 


252 

ra  el  armada  con  la  gente  que  en  ella  puede  quedar ,  y  ansí 
en  este  caso  se  puede  dar  crédito  á  lo  que  digo.  El  bizco- 
cho que  de  este  año  sobrare  podrá  servir  para  el  que  viene, 
pues  en  este  poco  tiempo  no  disminuirá  de  manera  en  la 
bondad  que  no  sea  muy  bueno  para  tal  efecto,  y  podríase  ir 
fabricando  lo  que  mas  convendrá,  que  siendo  de  menor  nú- 
mero ,  y  haciéndose  con  menos  priesa  dará  menor  suspicion. 

Tendráse  mas  cuantidad  de  pólvora  y  otras  municiones, 
porque  me  paresce  muy  poca  la  que  viene  puesta  en  la  me- 
moria, y  esta  estará  en  parle  mas  segura  de  lo  que  agora 
está ,  pues  se  dice  que  ha  de  venir  de  Flándes. 

Y  no  obstante  que ,  como  tengo  dicho ,  me  parece  impo- 
sible que  este  año  se  pueda  ejecutar  esta  empresa,  para  que 
no  se  pierda  tiempo,  queriendo  V.  M.  que  pase  adelante,  he 
hecho  secrestar  nueve  naves,  que  es  el  mayor  golpe  que 
podré  hallar  juntas  en  ninguna  parte ,  y  hállase  junto  este 
número,  porque  es  agora  el  tiempo  de  ir  á  tomar  en  Sicilia 
los  partidos  de  tratas  de  trigo  para  esta  ciudad ,  la  cual  pa- 
descerá  mucho  si  para  esto  de  su  mantenimiento  forzoso  le 
fallan  naves ,  ni  será  nada  provechoso  para  la  hacienda  que 
V.  M.  tiene  en  aquel  reino,  porque  importará  poco  haber 
trigo  si  no  hay  con  quien  sacarlo.  He  dicho  á  todos  que  yo 
no  oso  despedir  les  tudescos  sin  consultarlo  con  V.  M. ,  y 
que  para  en  caso  que  V.  M.  los  mandase  pasar  á  Ñapóles  ó 
á  Sicilia  hago  secrestar  estas  naves  para  que  los  lleven,  por 
la  incomodidad  que  seria  volver  con  armada  de  galeras  por 
ellos:  lo  mismo  haré  en  Liorna,  en  Ñapóles  y  Sicilia  de  las 
que  se  hallaren ,  diciendo  que  quiere  V.  M.  poner  grueso 
golpe  de  gente  en  ellas  para  socorrer  á  Malla  ó  la  Goleta  si 
sobre  ellas  se  pusiese  el  armada,  y  que  porque  se  ha  de  le- 
\  anlar  mayor  número  de  italianos  para  este  efeclo ,  es  for- 
zado entretener  buena  cuantidad  de  bajeles.  Por  mi  parte  no 


fo3 

se  dejará  de  tener  el  secreto  que  conviene  :  pero  de  io  dicho 
podrá  V.  M.  considerar  lo  poco  que  aprovecharán  estas  di- 
ligencias para  que  no  se  entienda  el  designo  principal.  Los 
tudescos  me  ha  parecido  mejor  que  queden  aquí ,  porque  en 
caso  que  se  hayan  de  despedir,  están  en  el  lugar  que  cumple; 
y  si  entretener  vale  mucho ,  mas  embarcarlos  frescos  de  la 
meitad  del  camino  menos,  que  llevarlos  á  Sicilia  y  tornarlos, 
que  en  estas  idas  y  venidas  yo  sé  bien  lo  que  gana  y  cual- 
quier enfermedad  que  les  da  los  deshace ,  y  su  misma  enfer- 
medad se  pega  también  á  la  gente  de  las  galeras.  ., 

Los  tres  mil  italianos  que  dice  la  memoria  que  se  paguen 
de  los  cient  mil  escudos  de  que  hizo  este  año  servicio  el  reino 
de  Sicilia ,  tengo  por  Arme  que  están  ya  todos  consumidos 
en  las  vituallas  y  municiones  que  se  han  hecho,  y  sé  que  hay 
gastado  en  cosas  del  armada  desle  año  otro  buen  número 
dado  sobre  mi  palabra  y  obligación ,  el  cual  se  ha  de  pagar 
luego  del  dinero  que  aquí  tomare  del  embajador ;  y  porque 
en  esto  podría  hablar  confusamente,  digo  que  en  llegando 
en  Sicilia  enviaré  la  cuenta  particular  de  todo ,  haciendo  in- 
troito al  tesorero  que  se  ha  señalado  en  aquel  reino  para  los 
gastos  estraordinarios  del  armada  deste  año  destos  cien  mil 
escudos;  y  de  los  demás  que  se  han  tomado  del  embajador  y 
de  los  cient  mil  del  duque  de  Alcalá,  se  hará  verdadera  y  cla- 
ra relación  de  todo  á  V.  M. 

Y  porque  no  conviene  á  su  real  servicio  que  estas  gale- 
ras esperen  aquí  la  respuesta  de  V.  M.  y  por  otros  inconve- 
nientes que  podrían  suceder  con  la  venida  del  armada  en  sus 
reinos,  aunque  fuera  de  harta  comodidad  el  aguardarla,  soy 
forzado  á  no  hacerlo  por  ser  lo  que  podría  acaescer  de  ma- 
yor importancia  que  la  comodidad  que  de  mi  estada  aquí  se 
seguiría,  y  por  esto  resolviéndose  V.  M.  en  que  se  despidan 
estos  tudescos,  podráse  dar  orden  al  embajador  que  lo  haga, 


254 

que  del  dinero  que  hubiere  yo  le  dejaré  la  parlé  que  será 
menester  para  pagarlos  hasta  el  tiempo  que  V.  M.  mandare 
que  se  despidan ,  y  siendo  V.  M.  servido  no  se  ha  de  alar- 
gar mas  la  respuesta  deste  despacho  de  hasta  diez  y  seis  ó 
diez  y  siete  di  as  porque  no  falte  el  dinero  en  caso  que  se  ha- 
yan de  despedir. 

Los  italianos,  me  dice  el  prior  D.  Hernando,  que  no  pa- 
sarán de  1,500  por  haberse  deshecho  los  demás.  A  estos  se 
dará  orden  que  vayan  en  Gerdeña,  aunque  por  mucha  priesa 
que  seden  en  despacharse  las  naves  que  se  han  secrestado, 
podria  haber  poca  diferencia  de  su  partida  á  la  vuelta  deste 
correo,  y  en  tal  caso  quedará  á  arbitrio  del  embajador,  según 
los  avisos  que  se  fueren  teniendo  de  la  armada  del  turco,  el 
enviarlo  con  mas  brevedad ,  ó  el  dilatarlo  hasta  ver  lo  que 
V.  M.  manda  de  entretenerlos  ó  despedirlos,  y  para  la  paga 
deste  tiempo  se  dejará  también  aquí  al  embajador  el  dinero. 

Llevo  comigo  los  españoles  de  Lombardía ,  porque  vayan 
las  galeras  en  orden ,  y  si  fuesen  llegados ,  seria  ya  partido, 
que  cierto  me  detienen  aquí  mas  de  lo  que  querría ;  creo  que 
lo  serán  dentro  de  dos  dias. 

Después  de  escrito  lo  de  arríba  he  recibido  una  carta  de 
Césaro  de  Ñapóles,  y  háme  enviado  á  decir  en  creencia  de 
ello  que  los  italianos  que  tiene  pasan  de  tres  mil,  que  es  al 
contrario  de  lo  que  al  prior  D.  Hernando  hablan  informado; 
pero  es  bien  verdad  que  confiesa  Césaro  de  Ñapóles  que  se 
le  han  ido  muchos ,  pero  que  los  ha  tornado  á  rehacer.  V.  M. 
mande  advertir  que ,  ansí  las  dos  pagas  de  los  italianos  como 
las  de  los  tudescos,  son  ya  pasadas,  y  que  de  aquí  adelante 
les  comienzan  á  faltar,  si  V.  M.  no  envía  á  mandar  de  donde 
los  han  de  pagar.  Y  Nuestro  Señor  guarde  la  vida  de  V.  M. 
por  tan  largos  años  como  sus  criados  deseamos  y  la  cristian- 
dad ha  menester.  De  Genova  á  20  de  mayo  1566. — Críado 


S55 

y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. — Don 
García  de  Toledo. 

Sobre. — A  la  S.  G.  R.  M.  del  Rey  nuestro  señor. 


Dentro  de  la  carta  \  ^ -'-Copia  de  caria  original  de 
anterior  se  hallan  las  i  D.  García  de  Toledo  á  Eraso ,  fecha 
dos  siguientes :  |  ^^  q¿^^^^  ¿  o)q  ¿^  ^^^^  ¿^  I5(.g 

111.™**  Señor.- — Bien  creo  que  se  acordará  v.  m  que  tra- 
tando en  Barcelona  desta  empresa  que  agora  S.  M.  propo- 
ne, le  dije  que  deseaba  mucho  que  me  hiciese  S.  M.  mer- 
ced del  cargo  della .  porque  me  paresce  que  en  esta  arle  de 
batir  y  combatir  un  lugar  y  por  donde  se  ha  de  hacer ,  no 
tiene  S.  M.  ningún  soldado  ni  criado  que  en  esto  me  haga 
ventaja  por  ser  cosa  pasada  por  mi  mano  en  diferentes  par- 
tes y  lugares ,  y  en  que  yo  con  el  ayuda  de  Dios  tengo  es- 
peranza de  mostrar  con  obras  á  S.  M.  la  verdad  destas  pala- 
bras. Suplíqueselo  v.  m.  de  mi  parle  y  asegúrele  que  si  yo  no 
conosciese  que  le  puedo  servir  en  ello  quizá  mejor  que  otro, 
que  no  lo  procurarla,  y  huélgome  que  esta  no  sea  materia  de 
intereses,  ni  se  pueda  sacar  della  sino  arcabuzazos,  para  que 
vea  S.  M.  que  no  me  mueve  á  ello  sino  solo  su  servicio,  y 
si  se  pusiese  por  inconveniente  el  haber  de  asistir  en  el  ar- 
mada, asegúrele  v.  m.  también  que  no  solo  no  es  esto  in- 
conveniente, pero  que  es  mas  necesario  y  útil  que  pase  todo 
por  mano  de  una  persona  si  sabe  lo  que  hace,  que  no  por 
dos,  porque  es  imposible  aunque  yo  mismo  quiera  como 
querré  que  la  gente  del  armada  trabaje  con  nadie  como  con 
quien  la  tiene  á  cargo,  y  aun  estoy  por  decir  que  no  pueden 
los  hombres  hacer  por  otros  lo  que  por  sí  mismos ,  pues  pa- 
rece que  á  esto  nos  inclina  la  natura  debajo  de  que  nacemos, 


250 

aunque  á  donde  se  atraviesa  el  servicio  de  S.  M.  está  claro 
que  se  ha  de  hacer  mas  de  lo  posihle ,  y  también  me  avise 
V.  m.  si  S.  M.  se  piensa  hallar  en  ella,  porque  no  hallán- 
dose ,  serán  menester  unas  provisiones  y  hallándose  otras, 
aunque  creo  que  esto  habrá  de  depender  de  las  fuerzas  con 
que  estonces  estuviere  el  enemigo,  y  por  amor  de  Dios  que 
no  se  piense  en  ejecutar  esto  por  este  año,  porque  seria  la 
verdadera  destruicion  del  servicio  de  nuestro  amo.  Nuestro 
Señor  guarde  la  Ule.  persona  de  v.  m.  como  desea.  De  Ge- 
nova á  20  de  mayo  1566. — Servidor  de  v.  m. — Don  Gar- 
cía de  Toledo. 

Sobre.  — Al  lile,  señor  el  señor  Francisco  de  Eraso  del 
Consejo  de  S.  M.  y  su  secrelario. 

2.* — Copia  de  caria  original  de  D.  García  de  Toledo  al  se- 
cretario Eraso,  fecha  cu  Genova  á  20  de  muyo  de  1566. 

Ule.  Señor. — Aquí  he  sabido  la  fuerza  que  ha  tenido  la 
malignidad  de  aquella  bendicta  ánima  de  Figueroa,  y  cierto 
pensé  que  con  su  muerte  se  habia  del  todo  dado  fin  á  los  pe- 
sares que  me  podia  hacer ,  y  veo  que  se  reservó  después  de 
ido  deste  mundo  á  darme  el  mayor  que  en  él  podia  rescebir, 
y  aunque  me  han  dicho  juntamente  con  la  nueva  que  que- 
daba todo  remediado  y  que  S.  M.  mostraba  favorescer  mas  á 
V.  m.  que  antes,  no  me  aquietaré  hasta  saber  por  su  propia 
carta  todo  lo  que  en  esto  pasa,  y  por  vida  de  mi  Sra.  doña 
Mariana  que  con  pensar  de  no  darme  desplacer  no  se  me 
encubra  ninguna  particularidad  de  lo  pasado  ni  de  lo  que  al 
presente  se  hace.  Ninguna  cosa  me  podrá  hacer  sentir  me- 
nos los  trabajos  de  v.  m,  sino  el  tener  mas  largo  campo  para 
mostrallc  con  la  hacienda,  y  con  la  persona  y  con  la  sangre 
cuan  vacía  de  interese  v  llena  de  amor  es  la  verdadera  amis- 


857 

laJ  que  yo  le  tengo,  la  cual  crea  v.  m.  que  durará  en  cuan- 
to durare  la  vida,  y  siendo  esto  ansí ,  no  es  menester  que  yo 
diga  que  si  fuere  menester  dejar  estos  cargos  y  ir  por  allá  á 
sacar  la  mayor  ganancia  que  yo  pretendo  y  puedo  preten- 
der, que  es  hacer  placer  á  v.  m.  Estándose  esto  ofrescido 
de  sí  mismo  no  hay  para  que  ofrescello  de  nuevo ,  y  si  ansí 
conviene  y  no  se  me  viere  cumplir  lo  dicho,  téngame  v.  m. 
por  ruin  caballero  y  por  ruin  amigo,  que  son  dos  cosas  de 
que  yo  no  querría  ser  notado  en  ningún  tiempo  ni  lugar, 
cuanto  mas  en  este  particular  que  trato.  Consejo  yo  no  lo 
daré  de  acá,  porque  demás  de  tener  ruiri  parescer,  aunque 
en  las  cosas  de  v.  m.  creo  se  avivarla  el  juicio,  estando  tan 
lejos  no  podría  hablar  sino  desatinos ,  y  también  por  saber 
cuan  poco  es  menester  donde  hay  tanta  prudencia.  Solo  diré 
que  el  que  sufre  puede  dejar  de  sufrir  cuando  quisiere,  y  el 
que  lo  deja  de  hacer  luego  no  puede  mas  remediarlo,  y  quizá 
una  de  las  cosas  que  pretenden  los  émulos ,  es  dar  á  v,  m. 
ocasión  para  que  no  sufra,  y  para  hacelles  pesar  y  que  no 
salgan  con  sus  designos  conviene  hacer  lo  contrario.  V.  m. 
es  sabio  y  prudente  y  esto  me  aquieta  en  todo ,  y  rae  hace 
no  ser  mas  largo  en  esta  materia. 

Son  estas  dos  cartas  que  escribo  á  S.  M.  tan  largas  y  es- 
critas en  tiempo  que  tengo  cien  mil  gentes  que  me  áají  vo- 
ces por  una  parte  y  por  otra ,  por  causa  de  las  embarcacio- 
nes, pagas  de  tudescos  y  italianos,  compras  de  victuallas  y 
municiones  y  otros  infinitos  negocios  que  no  me  dan  tiempo 
á  screbir  otras  particularidades,  y  si  en  estas  dos  cartas  hu- 
biere algún  defecto  por  ser  sobre  materias  muy  importantes 
y  escritas  con  mucha  priesa,  v.  m.  las  encubra  y  las  des- 
culpe. Ya  he  suplicado  por  diversas  cartas  á  v.  m.  que  no 
tome  mas  trabajo  de  hablar  á  S.  M.  en  mis  cosas  particula- 
res, porque  quiero  olvidarme  desta  materia  cuanto  pudiere. 
Tomo  XXX.  17 


á58 

La  caria  que  va  con  esla  suplico  á  v.  m.  me  haga  merced 
que  como  de  suyo  la  muestre  y  haga  leer  á  S.  M.;  digo  !^ 
que  trata  en  estas  cosas  de  galeras.  Nuestro  Señor  la  ilustre 
persona  de  v.  m.  guarde  y  estado  acreciente  como  desea. — 
De  Genova  á  20  de  mayo  de  4566. — Servidor  de  v.  m. — 
Don  García  de  Toledo. 

Sobre. — Al  Ule.  señor  el  señor  Francisco  de  Eraso,  del 
Consejo  de  S.  M.  y  su  secretario. 


Carla  original  de  D.  García  de  Toledo  al  secretario  Eraso, 
fecha  en  Genova  á  20  de  maijo  de  1566. 

Le  envía  la  cuenta  del  gasto  que  han  hecho  las  galeras  de  su 
mando  desde  que  las  tiene  á  su  cargo. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  HóQ.J 

^  "  Ilustre  Señor  : 

Ahí  va  la  suma  (1)  del  gasto  que  se  ha  hecho  en  estas 
galeras  después  que  yo  las  tengo  á  cargo ,  el  cual  monta  por 
año ,  como  mas  particularmente  se  verá,  cinco  mil  y  sete- 
cientos y  setenta  y  tres  ducados ,  que  sale  por  mes  cuatro- 
cientos y  setenta  y  nueve  y  medio,  que  es  harto  mas  de  lo  que 
yo  quisiera.  Aunque  es  infinita  suma  menos  de  lo  que  solia, 
como  mas  largamente  se  podrá  allá  cotejar  y  ver  por  los  gastos 
del  tiempo  que  las  tenia  D.  Juan  de  Mendoza,  puede  S.  M. 
tener  por  firme  que  no  llegaran  á  esta  suma  si  no  fuera  por 
las  causas  que  agora  diré.  La  primera  es,  que  oficiales  nue- 
vos, aunque  tengan  voluntad  de  servir  y  se  les  diga  y  ad- 

(1)  No  está  con  la  carta. 


250 

\ierta  lo  que  han  de  hacer ,  empachados  en  tan  grandes  ne- 
gocios como  estos  años  se  han  ofrescido  de  Malta  y  del  Peñón, 
no  han  podido  ejecutar  mis  órdenes  como  con  venia ,  ni  yo 
por  las  mismas  causas  podido  estar  tan  continuamente  sobre 
ellos  para  hacérselo  hacer.  Demás  desto  hánse  comprado  las 
victuallas  en  muchas  partes  y  con  muchas  priesas,  y  en 
tiempos  muy  caros  y  faltos  de  pan  y  vino ,  pues  en  algunos 
lugares  do  se  ha  llegado ,  verá  por  la  cuenta  ser  el  vino  á 
muy  altos  precios,  y  el  pan  en  Ñapóles  á  cuarenta  carünes  el 
quintal.  Háse  de  advertir  que  el  año  que  se  fué  al  Peñón  se 
navegó  todo  el  invierno ,  pues  se  vino  al  puerto  á  invernar  á 
primero  de  marzo  y  se  salió  á  navegar  á  los  28  del  mismo ,  y 
por  esto  no  se  pudo  gozar  del  beneficio  grande  de  la  inver- 
nada. Téngase  por  firmísimo  que  andan  las  galeras  después 
que  yo  las  tengo ,  no  solo  como  las  traia  D.  Juan  de  Mendoza, 
pero  mucho  mas  bien  en  orden  y  proveídas ,  y  la  gente  mas 
contenta  y  bien  tractada  que  cuantas  S.  M.  tiene  á  su  sueldo, 
y  los  esclavos  dellas  proveídos  de  zapatos  y  calcetas,  que  es 
gaslo  no  acostumbrado  y  muy  provechoso  porque  no  se  le 
mueran  á  S.  M.  Háse  también  de  mirar  en  que  en  esta  cuenta 
que  se  envía  entra  el  adobio  que  se  hizo  agora  al  salir,  que 
es  en  el  tiempo  que  mayores  y  mas  notables  gastos  se  hacen, 
y  que  quedan  las  galeras  adobadas  hasta  la  otra  salida. 
Háse  también  de  notar  que  de  las  vituallas  que  se  han  dado 
y  entregado  á  los  patrones ,  las  cuales  van  puestas  por  cargo 
y  gasto ,  de  lo  cual  se  les  ha  de  tomar  cuenta ,  y  dellas  no 
puede  dejar  de  haber  alcance  contra  ellos,  y  ellos  no  pueden 
ser  acreedores  como  en  otras  cuentas  particulares  pueden  ser, 
porque  en  esta  no  pueden  decir  que  han  cumplido  y  se  les 
queda  debiendo ,  porque  demás  que  no  lo  podrían  hacer ,  esto 
seria  contra  las  órdenes  que  se  les  ha  dado ;  de  manera  que 
en  esta  partida  se  puede  estar  á  la  ganancia  y  no  á  la  per- 


260 

dida.  Esté  S.  M.  seguro,  y  ansí  se  lo  prometo,  que  en  la  re- 
lación que  se  enviará  deste  año  presente  no  pasarán  las  ga- 
leras de  cinco  mil  ducados,  y  esto  sin  meter  en  ello  la  ga- 
nancia que  he  hecho  con  las  dichas  galeras  en  beneficio  de 
S.  M.  del  trigo  que  con  ellas  he  traido ,  que  pasará  de  doce 
mil  escudos,  y  si  no  fuera  forzado  á  dejar  las  veinte  galeras 
en  la  Goleta  y  también  por  haber  dejado  en  aquella  forta- 
leza la  carga  del  trigo  que  traian  por  no  caber  en  las  demás, 
pasará  de  20  mil ,  que  si  esta  partida  yo  la  metiese  en  be- 
neficio del  sueldo ,  llegarla  este  año  á  mucho  menos  número 
que  á  los  cinco  mil.  Desta  ganancia  pienso  hacer  hasta  cua- 
renta cañones,  añadiendo  el  dinero  que  faltará.  Este  número 
de  artillería  para  proveer  el  reino  de  Sicilia ,  que  no  hay  en 
él  una  pieza ;  y  S.  M.  puede  creer  y  tener  por  fée,  que  si 
tractase  mi  hacienda  con  el  cuidado  que  tracto  la  suya  y 
me  desvelase  tanto  en  ello ,  me  seria  esto  de  harto  mas  pro- 
vecho. Mande  S.  M.  ver  el  gasto  que  hace  D.  Alvaro  de 
Bazan  con  las  suyas ,  y  verá  luego ,  aun  en  este  solo  par- 
ticular, de  la  importancia  que  es  servirle  con  el  amor  y  vo- 
luntad que  yo  le  sirvo :  saqúese  también  la  cuenta  de  lo  que 
gastan  las  galeras  de  Ñapóles ,  y  verse  ha  la  diferencia  que 
hay  y  habrá  de  unos  gastos  á  otros.  Háme  hecho  relación  el 
veedor  Morillo  que  anda  en  ellas ,  por  muy  grande  encares- 
cimiento  del  beneficio  de  la  hacienda  de  S.  M. ,  que  se  gasta 
cada  año  en  cada  una  seis  mil  y  setecientos  escudos.  Y  crea 
S.  M.  que  su  particular  interese  me  hacia  desear  traer  todas 
estas  galeras  debajo  de  mi  mando ,  porque  maldito  el  fructo 
que  yo  podia  sacar  dello,  sino  mas  trabajo.  Pero  paresce 
hado  mió  particular  que  cuanto  he  dicho  algunas  veces  por 
su  servicio ,  he  visto  que  se  haya  creído  ser  dicho  por  mi 
particular;  y  así  acaesce  siempre  á  quien  tiene  tanta  pasión 
en  servir  que  se  reduce  á  las  veces  á  alargar  en  lo  que  loca 


261 

á  la  consciencia  quizá  mas  de  lo  que  convernía ,  y  de  aquí 
viene  Dios  á  permitir  lo  dicho ,  y  por  él  juro  que  nunca  en 
este  particular  tuve  escrúpulo  por  mis  cosas,  y  téngole 
grande  en  lo  que  toca  al  interese  de  S.  M.,  porque  me  pa- 
resce  que  el  deseo  que  tengo  de  guardar  su  hacienda ,  me 
hace  algunas  veces  caer  en  este  inconveniente ;  y  esto  se 
puede  conoscer  bien  ser  ansí ,  pues  sacando  el  fructo  que  he 
sacado  de  los  servicios  de  toda  la  vida  y  desos  dos  años  que 
han  sido  notables ,  voy  siguiendo  este  camino  terablándome 
ya  los  brazos ,  y  mostrándome  el  mal  presente  cuan  cerca 
tengo  el  fin  de  la  vida ,  y  cuanto  me  convernía  emplear  lo 
poco  que  queda  en  servicio  de  Dios,  de  quien  tan  grandes 
mercedes  he  rescibido.  No  me  alargaré  en  esta  materia  mas 
de  tornar  á  certificar  que  el  gasto  no  pasará  mas  de  los  cinco 
mil  ducados  dichos;  digo  quitando  del  las  cosas  que  se  han 
acrescenlado  de  sueldo  de  cient  ducados  al  mes  á  los  capita- 
nes de  dos  en  dos ,  y  también  las  otras  cosas  que  se  han  aña- 
dido del  tiempo  de  D.  Juan  de  Mendoza.  Nuestro  Señor  la 
lile,  persona  de  v.  m.  guarde  y  estado  acresciente  como 
desea.  De  Genova  á  20  de  mayo  1566. — Servidor  de  v.  m, 
— Don  García  de  Toledo. 

Sobre  de  la  carta.  —  AI  lile,  señor  el  señor  Francisco 
de  Eraso,  del  Consejo  de  S.  M.  y  su  secretario,  ele. 


26ií 


Copia  de  carta  orüfinal  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M., 
[echa  en  la  Specie  d  24  de  mayo  1566. 

Llega  parte  de  la  armada  del  turco  á  Modon. 

ÍEl  duque  me  ha  dicho  esta  noche  que 
ha  de  haber  á  la  mañana  consejo  de  guer- 
,-a,  bien  pava  que  allí  se  veaa  estas  car- 
tas  por  todos ,  pues  no  hay  en  ellas  cosa 
que  lo  estorbe, 

(Archivo  general  (le  Simancas. — Estado,  legajo  nüm,  iloO.y 

S.  C.  R.  M. 

Anoche  escribí  á  V.  M.  lo  que  se  ofi'escia  y  le  envié  el 
duplicado  de  los  20  del  misino;  hoy  he  llegado  aquí  en  la 
Specie ,  y  por  el  camino  me  ha  alcanzado  un  correo  del  du- 
que de  Alcalá  con  los  avisos  que  serán  con  esta  de  la  salida 
de  la  armada  del  turco  y  llegada  de  veinte  dellas  á  Modon, 
y  lo  demás  que  V.  M.  verá,  y  siendo  ansí,  temóme  que  la 
infantería  italiana  que  habla  de  levantar  Sigismundo  de  Gon- 
zaga  para  ir  á  Gerdeña  seria  muy  tardía,  y  que  la  dilación 
podría  traer  algún  gran  inconveniente,  y  ansí  me  ha  paresci- 
do  hacer  la  deliberación  y  provisión  que  V.  M.  verá  por  la 
copia  de  la  carta  que  escribo  al  embajador  Fígueroa.  Descon- 
forman estos  avisos  de  los  pasados  en  el  número  de  la  arma- 
da ,  porque  hasta  aquí  han  dicho  que  eran  ciento  y  cinco  ó 
ciento  y  seis,  y  agora  dicen  ciento  y  veinte,  que  cualquier 
poco  número  que  cresciesen  á  las  ciento  y  seis  seria  de  mu- 
cha importancia.  Sé  cierto  que  haciendo  las  diligencias  que 


265 

se  podráa  hacer ,  teniendo  los  buques  que  tengo  en  Ñapóles 
j  Sicilia ,  que  se  podrán  armar  veinte  ó  veinte  y  cinco  gale- 
ras; pero  hasta  veinte  me  asegurada  dello,  y  aunque  en  es- 
tos casos  no  se  puede  hablar  con  firmeza,  como  he  escrito 
otras  muchas  veces,  ni  asegurarse  de  ninguna  esperanza, 
todavía  se  podrian  ofrescer  ocasiones ,  que  no  dejándolas  pa- 
sar  con  dilaciones ,  se  pudiese  esperar  algún  buen  subceso, 
y  aunque  el  armada  se  puede  juntar  con  los  cosarios ,  y 
por  esta  causa  disminuir  mas  la  esperanza  de  lo  dicho,  to- 
davía me  paresce  que  debe  V.  M.  escribir  al  duque  de  Mr 
cala  que  en  caso  que  haya  de  ir  el  armada  de  V.  M.  á  bus- 
car la  de  los  enemigos  me  dé,  ansí  tudescos  como  italianos, 
como  cualquiera  otra  cosa  que  de  aquel  reino  le  pidiere ,  y 
porque  en  tal  caso  seria  menester  valerme  de  todos  los  es- 
pañoles que  están  en  la  Goleta,  ansí  de  los  que  de  nuevo 
han  entrado  del  tercio  de  Ñapóles,  como  de  los  dos  mil  que 
allí  estaban  antes,  de  los  cuales  pensaría  servirme  poniendo 
dos  mil  tudescos  en  su  lugar ,  y  porque  no  hubiese  impedi- 
mento en  ello ,  suplico  á  V.  M.  que  en  íal  caso  mande  escre- 
bir  á  D.  Alonso  que  siga  en  esto  mi  orden ,  y  poniendo  tam- 
bién tudescos  en  Orbitelo ,  Pomblin  y  Puerto  Hércules  envíe 
V.  M.  á  mandar  lo  mismo ,  y  la  infantería  italiana  que  mas 
fuese  menester  levantar,  lo  haré,  si  viere  á  la  jornada  con-r 
venir  ansí,  repartiéndolos  de  quinientos  en  quinientos  agente 
principal  para  que  trayan  mejor  infantería.  Vo  hablo  en  cosa 
de  que  tengo  poca  esperanza,  pero  porque  no  se  pierde 
nada  en  escrebirlo ,  nj  de  allá  en  que  se  provea ,  suplico  á 
V.  M.  humilmente  que  mande  enviar  esta  orden. 
-  Al  embajador  dejé  orden  que  levantase  doscientos  gas- 
tadores mas  para  la  Goleta  y  mil  ducados  para  ello ,  y  po- 
Aer  en  caso  de  necesidad  ejecuiar  lo  que  aquí  digo,  me  ha 
■parescido  llevar  conmigo  el  regimiento  del  conde  Alberico, 


264 

porque  dos  mil  italianos  que  están  hechos  de  Césaro  de  Ña- 
póles puedan  acudir  con  brevedad  á  lo  de  Córcega ,  de  lo* 
cuales  en  el  caso  ya  dicho  me  podré  servir  para  la  armada. 

Suplico  áV.  iM.  sea  servido  mandar  dar  mucha  priesa 
en  la  venida  de  las  galeras  que  trae  D.  Alvaro,  porque  mtí 
lian  desacomodado  mucho  para  esta  embarcación.  Y  Nues- 
tro Señor  guarde  la  vida  de  V.  M.  por  muy  largos  años  como 
la  cristiandad  ha  menester.  De  la  Specie  á  24  de  mayo  de 
1566. — Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y 
manos  besa.- — Don  García  de  Toledo. 

Sobre. — A  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro  señor, 

I        Copia  de  caria  que  D.  García  de 
]h\T¡i^iú¡Z^^  '*'  ^^'  I  ^'^^^'^^  '""''^'^  "^  embajador  de  Gé- 


•d> 


(  nova  á  24  de  mayo  de  15G6. 


Para  enviar  á  S.  M. 

Muy  Ille.  Señor  : 

Yo  he  rescibído  hoy  cartas  del  duque  de  Alcalá ,  y  los 
últimos  avisos  que  tengo  irán  aquí ,  aunque  creo  que  los  en- 
vía el  señor  duque  de  Alcalá  á  V.  S.  Viendo  que  la  armada 
está  tan  adelante,  me  hace  temer  mucho  que  la  gente  de  Gis- 
mundo  de  Gonzaga  no  será  á  tiempo  para  ir  en  Cerdeña ,  y 
ansí  me  ha  parescido  que  se  lleven  en  aquella  isla  dos  mil 
infantes  de  los  de  César  de  Ñapóles,  y  en  lugar  dellos  lleva- 
ré en  esta  armada  toda  la  coronelía  del  conde  de  Alberico  de 
Lodron ,  porque  en  caso  que  se  pudiese  ofrescer  ocasión  de 
prometer  esperanza  de  poderlos  resistir  por  mar,  podríanse 
meter  dos  mil  de  ellos  para  guardia  de  la  Goleta ,  y  sacar 
otros  tantos  españoles  que  allí  hay,  sin  los  que  yo  he  puesto 


265 

del  tercio  de  Ñapóles;  demás  deslo  estos  alemanes  serán  en- 
tretenidos por  mas  tiempo ,  y  por  tal  causa  quedarán  mas 
contentos ,  y  también  se  aligerarán  eslas  tierras  de  la  seño- 
ría del  trabajo  del  alojamiento.  Ansí  que  V.  S.  puede  tener 
en  orden  la  meitad  del  dinero  que  le  dejé  para  estas  dos  co- 
ronelías, y  si  hallare  ahí  partidos  de  remitírmelos  sin  inte- 
reses ó  con  poco ,  sáquelos  á  pagar  a  Sicilia  al  tesorero  de 
la  armada ,  y  sino  mándemelo  luego  avisar  porque  los  toma- 
ré yo  luego  á  cambio  á  pagar  á  V.  S.,  y  mande  V.  S.  es- 
cribir una  carta  al  señor  duque  de  Alburquerque  para  que 
suspenda  el  levantar  la  gente  de  Gismundo ,  y  yo  también 
le  escribo,  y  envíesele  con  esta . 

Mande  Y.  S.  también  dar  toda  la  furia  y  priesa  posible 
para  que  esta  gente  que  ha  de  ir  á  Cerdeña  se  embarque 
luego ,  y  puédese  servir  para  el  flete  de  las  naves  y  alguna 
provisión  de  victualla  de  la  paga  que  quedó  en  su  poder  para 
levantar  la  gente  de  Gismundo,  y  desto  se  le  dará  algún  so- 
corro demás  que  se  les  dará  la  media  paga  del  dinero  que 
está  acá. 

Todavía  me  afirmo  en  que  esos  señores  deben  proveer  á 
Córcega,  y  no  descuidarse  della  porque  no  sea  juncto  el 
campo  y  el  trueno.  Yo  espero ,  aunque  será  con  trabajo, 
embarcar  esta  gente  y  partir  mañana. 


266 

Copia  de  caria  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M.  20  de^^ 
maijo  de  1566. 

Avisos  de  Constantinopla  y  noticias  de  que  en  Marsella  se  ar- 
maban galeras. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.)        n 

En  este  punto,  que  es  en  el  que  este  correo  se  parte ,  ha 
venido  aquí  un  secretario  de  la  señoría  al  embajador  y  á 
mí  con  unas  cartas  interceptas  de  Sant  Pedro  Corzo  y  cier- 
tos avisos  de  que  en  Marsella  armábanse  galeras  para  ir  á 
lo  de  Córcega ,  y  los  que  esta  mañana  me  envió  la  señoría 
de  la  armada  del  turco,  parece  que  corresponden  con  lo  que 
el  mismo  Sant  Pedro  Corzo  dice  y  da  esperanza  en  su  caria, 
que  procuraré  de  enviar  con  esta  la  copia,  y  si  no  el  emba- 
jador que  ahí  reside  de  la  señoría  la  mostrará  á  V.  M.;  y  es- 
tos avisos  de  Constantinopla  yo  los  tengo  por  ciertos ,  y  los 
dos  caballos  que  en  otros  muchos  avisos  han  siempre  dicho 
que  el  armada  traía  por  galera  dejando  lo  de  Malla  para  las 
otras  partes,  parecería  desatino,  y  para  lo  de  Córcega  serles 
hia  muy  provechosos.  Si  es  verdad  lo  de  las  galeras  de  Fran- 
cia, confirmarme  hia  mucho  en  que  el  armada  viene  á  Cór- 
cega, y  lo  que  escriben  que  si  la  armada  de  V.  M.  estaba 
desunida,  pasaría,  esto  debe  ser  pareciéndoles  que  es  menes- 
ter que  la  hallen  desta  manera  para  pasar  seguros,  y  que  para 
volver  teniendo  ya  la  compañía  de  las  galeras  de  Francia  no 
temerían  de  la  de  V.  M,  aunque  estuviese  unida.  Por  esta 
causa  me  parece  que  por  todos  respectos  es  bien  embarcar 
en  estas  galeras  dos  mil  hombres  de  los  de  Césaro  de  Ñápe- 
les, porque  aunque  me  ha  avisado  que  habla  tornado  á  reha- 
cer la  gente  al  número  de  tres  mil,  mas  vale  para  servir  es- 


267 

coger  Jos  mil  buenos  que  embarcar  tres  mil  cu  los  cuales  ha- 
bría mucha  lujada.  También  pienso  hacer  luego  levantar 
otros  mil  y  quinientos  ó  dos  mil  para  enviar  en  Gerdcña  coa 
la  persona  de  Gismuado  de  Gonzaga  y  dejar  aquí  dineros  al 
embajador  para  darles  una  paga ,  no  obstante  que  habiendo 
de  dejar  otra  media  para  los  tudescos ,  quedará  poco  dinero 
para  lo  que  se  ha  de  hacer,  y  tal  ocasión  se  podria  ofrescer 
si  los  enemigos  flacamente  pasasen  en  estas  partes  que  se 
hiciese  algún  buen  efecto.  Coa  esta  ocasión  he  enviado  á 
persuadir  á  la  señoría  que  hagan  dos  mil  infantes  para  Górt 
cega,  porque  demás  de  convenirles  asegurar  lo  de  allí ,  se- 
ria útil  para  lo  que  pudiese  ofrescerse  que  se  hallase  golpe 
de  gente  levantada  sin  gasto  de  Y.  M.,  y  estas  nueve  naves 
que  se  hallan  secrestadas,  que  serán  de  portada  de  18  mil 
salmas  que  serán  tres  mil  toneladas ,  servirán  como  tengo 
escripto  para  llevar  la  gente  á  Cerdeña.  .. ,  ^¡,,, 

Al  respaldo  se  lee:  A  S.  M.  ea  20  de  mayo  de  1566. 


Copia  de  carta  de  D.  García  de  Toledo  á  D.  Alvaro ^fií.\ 
Bazan.  Lerzo  25  de  mayo  de  1566. 

Embarque  de  infantería. 
(Archivo  del  Exento.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.J 

Mrv  Ille.  Señor  : 

Con  deseo  lie  aguardado  y  espero  la  venida  de  V.  S., 
porque  cierto  hubiera  importado  mucho  vernos  en  Genova, 
y  pues  no  se  ha  podido  diré  en  esta  á  V.  S.  que  cumple  al 
servicio  de  S.  M.  que  ea  las  galeras  que  trae  á  su  cargo  y 


268 

en  las  del  señor  duque  de  Saboya  que  se  juntarán  con  ellas, 
embarqué  aquí  en  Lerzo  al  coronel  Césaro  de  Ñapóles  con 
mil  infantes  italianos  y  mas  si  cupieren ,  con  los  cuales  se 
irá  V.  S.  á  la  vuelta  de  Caller  y  los  dejará  al  señor  visorey 
de  aquel  reino,  y  porque  hallará  V.  S.  también  en  Lerzo 
una  ó  dos  naves  en  que  van  otros  mil  hombres  para  aquel 
reino,  las  ha  de  hacer  sacar  V.  S.  del  puerto  y  procurar  de 
ampararlas  lo  mas  que  se  pudiere  para  que  vayan  también 
allí  con  seguridad,  y  hecho  esto  se  podrá  V.  S.  partirse  de 
Caller  y  venirse  la  vuelta  de  Mesina  con  la  mas  brevedad 
que  fuere  posible ,  á  donde  me  hallará  ó  orden  de  lo  que  ha- 
brá de  seguir.  Y  porque  el  coronel  Césaro  de  Ñapóles  es  muy 
antiguo  servidor  y  soldado  de  S.  M. ,  y  que  meresce  cualquiera 
regalo  y  buen  tractamiento ,  suplico  á  V.  S.  que  se  le  haga 
en  el  viaje.  Porque  el  señor  embajador  dirá  esto  y  lo  demás 
que  sabe  tocante  á  estas  materias,  me  remitiré  á  S.  S.* 

Al  respaldo  se  lee:  Lerzo  1566. — Don  Alvaro  de  Ba- 
zan. — A  XXV  de  mayo. 

Capitana . — Púa . — Toscana . — Victoria .  — Fiorenze .  — 
Pisana.  — Pace. — Griífona.  -— Collonna. 


I 


269 

m 
Carta  original  de,  D.  Alvaro  de  Bazan  á  D.  García  de  To- 
ledo. Genova  51  de  mayo  de  156G. 

Motivos  de  no  haber  podido  llegar  antes  á  Genova— Mal  estado 
de  sus  galeras — Embarque  de  infantería  italiana — Presa  de  un  na- 
vio enemigo. 

(Archivo  del  Exorno.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
Illmo.  Señor: 

Yo  llegué  á  Genova  hoy  último  de  mayo  y  no  sé  decir 
lo  que  he  sentido  no  hallar  aquí  á  V.  E.,  y  la  tardanza  de 
mi  viaje  no  ha  sido  por  no  haber  muchos  dias  que  partí  del 
puerto  sino  por  malos  tiempos  que  ha  hecho ,  que  han  sido 
tan  fortunosos  que  en  todo  abril  no  se  ha  podido  navegar,  y 
después  que  cesaron  las  aguas  han  sido  los  levantes  tantos 
que  he  venido  prohejando  mas  que  las  dos  partes  del  cami- 
no ,  y  ansí  viene  la  chusma  bien  fatigada ,  porque  es  nueva 
mucha  parte  della. 

De  las  galeras  que  traigo  fuera  menester  trocar  las  tres 
porque  vienen  muy  mal  specialmente  la  Serafina ,  que  me 
ha  hecho  perder  mucho  tiempo  en  este  camino.  Yo  hablé  al 
embajador  para  veer  si  pudiera  darme  tres  buques  de  los 
que  aquí  tiene,  porque  en  Barcelona  no  hubo  hechas  gale- 
ras que  poder  trocar.  Díjome  que  sin  orden  de  V.  E.  no  po- 
día dejar  ninguna,  y  ha  sido  forzado  dejar  la  Serafina  y  iré 
con  ocho.  Y  porque  las  galeras  vienen  muy  sucias  ha  sido 
necesario  despalmar  aquí ,  y  ansí  se  hará ,  y  en  dos  ó  tres 
dias  me  despacharé  y  h-é  á  Lerzo,  como  V.  E.  manda,  y 
embarcaré  al  coronel  César  de  Ñapóles  con  la  gente  que  pu- 
diere llevar  en  las  galeras,  y  no  podrá  ser  tanta  como  V.  E. 


S70 

manda ,  porque  Mos  de  Leni  entiendo  que  no  verná  á  tiempo 
según  me  dijo  cuando  pasó  por  Villafranca ,  porque  aunque 
tiene  las  galeras  á  punto  no  le  habían  venido  los  dineros  para 
la  paga  y  provisión  dellas ;  y  demás  de  faltar  estas  galeras 
y  la  que  yo  aquí  dejo,  S.  M.  me  mandó  hacer  seiscientos 
soldados  que  vienen  en  estas  galeras  demás  de  la  gente  que 
tenían  por  las  muchas  galeotas  de  Argel  que  andaban  fuera, 
y  por  no  tener  orden  de  V.  E.  ni  de  S.  M.  para  dejar  nin- 
gunos dellos  no  lo  haré;  y  ansí  embarcaré  en  las  galeras  to- 
dos los  que  pudiere  y  los  demás  irán  en  las  naos ,  y  la  per- 
sona de  César  de  Ñapóles  llevaré  en  mi  galera,  á  donde  será 
regalado,  como  V.  E.  manda.  Y  porque  los  italianos  puedan 
ir  todos,  el  señor  embajador  provee  de  otra  nao,  á  las  cua- 
les sacaré  del  puerto  y  procuraré  de  hacer  la  mas  conserva 
que  pudiere ,  y  dejada  la  gente  en  Galler  seguiré  mi  viaje 
hasta  hallar  á  V.  E.  en  Mesina  ó  orden  de  lo  que  he  de  ha- 
cer, en  lo  cual  porné  la  mas  diligencia  que  pudiere.  Y  guar- 
de Nuestro  Señor  la  Illma.  persona  de  Y.  E.  con  el  acrecen- 
tamiento de  estado  que  sus  servidores  deseamos.  De  galera 
sobre  Genova  31  de  mayo  1566. 

De  su  letra. 
qX  .oíiíflifi') 

Escrita  esta  he  sabido  que  las  naos  aun  no  tienen  las 
vituallas  embarcrdas.  A  todo  daré  la  priesa  posible.  Olvidá- 
baseme  de  decir  como  en  el  camino  tomé  un  navio  de  doce 
bancos  con  veinte  y  seis  moros  y  dos  cristianos  que  venían 
él  y  otros  dos  á  llevarse  un  lugarejo  de  moriscos  de  la  costa 
de  Granada.  —  Beso  las  manos  á  V.  E.' — Don  Alvaro  de 
Bazan. 

Sobre. — Al  Illmo.  señor  mi  señor  D.  García  de  Toleda, 
capitán  general  de  la  mar  y  visorey  del  reino  de  Sicilia. 


S74 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo.  Madrid 
{°dejiiniodcÍDñQ.  'P 

Le  pregunta  si  será  conveniente  tener  sesenta  galeras  en  el 
puerto  de  Brindis  para  impedir  que  el  turco  venga  á  Italia. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr,  duque  de  Medinasidonia.) 
El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  y  capitán  ge- 
neral: En  cierto  recuerdo  que  aquí  se  nos  dio  por  una  per- 
sona celosa  de  nuestro  servicio  se  nos  ha  advertido  que  con- 
vernía,  así  para  seguridad  de  la  Pulla,  que  come  sabéis  está 
tan  al  opósito  del  turco ,  como  del  reino  de  Sicilia ,  Malta  y 
las  demás  fuerzas  y  presidios  de  Berbería ,  tener  en  el  puerto 
de  Brindez  hasta  60  galeras  de  ordinario,  pues  demás  que 
por  este  camino  se  verná  á  romper  el  designo  del  turco  y 
ponerle  en  freno  para  que  no  venga  cada  año  á  infestar  la 
cristiandad  con  la  libertad  que  hasta  aquí ,  temiendo  el  daño 
que  se  le  podría  hacer  desde  allí  en  sus  tierras ,  seria  muy 
mayor  cuando  se  retirase  con  su  armada  á  Gonstantinopla, 
allende  que  con  tener  allí  estas  sesenta  galeras  se  daría  gran- 
de ánimo  á  toda  la  Grecia  para  con  la  ocasión  rebellarse  con- 
tra 61 ,  viendo  tan  cerca  el  amparo  y  refugio  de  nuestras  fuer- 
zas, dejado  á  parte  el  respecto  que  de  aquí  vendrían  á  tener 
nuestras  cosas ,  así  los  venecianos  como  los  otros  príncipes 
cristianos  que  tienen  tracto  y  comercio  con  el  turco.  Y  por- 
que siendo  este  negocio  de  la  cualidad  é  importancia  que  es, 
queremos  entender  lo  que  cerca  dello  os  ocurre,  seremos 
servido  que  considerado  bien  el  pro  y  contra  que  en  materia 


272 

de  lanto  peso  se  debe  considerar ,  nos  aviséis  de  lo  que  en 
ella  (según  el  estado  presente  de  las  cosas)  os  pareciere,  para 
que  con  mayor  acuerdo  y  fundamento  se  vea  y  piense  lo  que 
mas  convenga  para  él  bien  de  los  negocios.  De  Madrid  á  pri- 
mero de  junio  mdlxvi. — Yo  el  Rey. — Vargas. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey 
de!  reino  de  Sicilia  y  capitán  general  dél  y  de  la  mar. 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo.  Escorial 
3  de  junio  de  1566. 

El  marqués  Antonio  de  Oria  pide  licencia  para  retirarse  del  ser- 
vicio. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medina$idonia.J 

El  Rey. 

lile.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  y  capitán  ge- 
neral :  Por  parte  del  marqués  Antonio  de  Oria  nos  ha  sido 
suplicado  que  teniendo  consideración  á  lo  mucho  que  nos 
ha  servido ,  y  á  que  por  hallarse  ya  de  edad  no  puede  conti- 
nuarlo como  por  lo  pasado,  le  mandásemos  dar  licencia  para 
que  se  pueda  retirar  á  Genova  para  descansar  los  dias  que 
le  quedan  de  vida ,  haciéndole  acudir  allí  con  los  salarios  de 
consejero  colateral  y  capitán  de  gente  de  armas  del  reino  do 
Ñapóles;  y  porque  antes  de  responderle  queremos  entender 
de  vos  la  necesidad  que  tendréis  de  su  persona  para  las  co- 
sas de  nuestro  servicio,  seremos  servido,  y  así  os  lo  manda- 
mos, nos  lo  aviséis  con  el  primero,  y  si  será  de  inconvenienic 
concederle  la  dicha  licencia.  Del  Escorial  3  de  junio  mdlxvi. 
—Yo  el  Rey. —Vargas. 


275 

Sobre. — Al  lile.  D.  García  de  Toledo,  visorey  y  capitán 
general  en  el  nuestro  reino  de  Sicilia  y  en  la  mar. 


Carta  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M.  ,  fecha  en 
Capri  á  4  de  junio  de  1566. 

Dice  que  no  conviene  enviar  un  buen  golpe  de  galeras  á  la  cos- 
ta de  Cataluña  como  se  le  manda — Infantería  de  Ñapóles— Dinero. 

f Archivo  gmerat  de  Simancas. — Estado.  legajo  núm.  1130  J 
S.  C.  R.  M. 

Desde  Genova,  y  de  la  Specie  y  Lecce  escribí  á  V.  M.  lo 
que  se  ofrescia ;  después  llegué  aquí  en  Ñapóles  á  los  oO  del 
pasado,  á  donde  rescibí  la  de  V.  M.  de  9  del  mismo,  y  ten* 
dré  poco  que  decir  en  respuesta  della ,  pues  desde  Genova 
satisfice  á  los  puntos  mas  principales,  á  lo  cual  me  remito, 
confirmando  de  nuevo  lo  que  dije  en  respuesta  de  la  carta 
que  V.  M.  me  escribió  á  25 de  marzo,  añadiendo  que  no  se 
podría  pensar  ni  hacer  cosa  mas  desconveniente  al  servicio 
de  V.  M.  que  esta  por  las  causas  dichas ,  las  cuales  se  van 
confirmando  mas ,  pues  en  Ñapóles  no  he  hallado  mas  de 
solas  dos  naves.  Por  lo  que  suplico  á  V.  M.  mande  conside- 
rar mucho  este  negocio ,  el  cual  puede  V.  M.  tener  por  firme 
que  primero  que  se  ponga  en  ejecución,  será  pasado  una 
buena  parte  del  invierno.  >honn 

He  visto  lo  que  V.  M.  me  manda  en  lo  de  Malta ,  y  ha- 
bría sentido  mucho  el  haber  resuelto  ni  concurrido  con  el  pa- 
rescer  del  maestre  si  á  él  y  á  mí  no  hubiese  Y.  M.  remitido 
este  particular,  y  ansí  puede  tener  por  firmísimo  que  la 
gente  que  allí  se  pusiera  ó  pusiere  correrá  manifiesto  peligro 
Tomo  XXX.  18 


de  perderse  viniendo  el  armada  con  la  pujanza  que  cuando 
se  tomaron  estas  resoluciones  se  decia ,  y  viniendo  flaca  y 
viéndome  á  mi  armado  tan  cerca  della ,  estaba  claro  que  no 
hablan  de  osar  emprenderlo ;  pero  pues  lo  he  dicho  y  cum- 
plido con  lo  que  debo,  y  veo  que  V.  M.  manda  por  esta 
carta  que  en  cualquiera  manera  se  ponga ,  la  primera  cosa 
que  haré  en^llegando  será  enviarlos  á  ofrescer  al  maestre  y 
hacer  la  provisión  queriéndola  rescibir ,  y  aunque  la  hubiera 
demandado  dende  el  principio ,  no  se  la  podia  dar  porque  la 
habia  de  traer  de  Genova ,  y  esto  no  ha  sido  posible  hasta 
agora  por  causa  de  los  contrarios  tiempos  como  lo  tengo  es- 
crito; y  V.  M.  crea  cierto  que  las  resoluciones  que  se  toman 
de  tan  lejos,  y  fuera  de  los  lugares,  y  sitios  y  tiempos,  podrán 
ser  causa  de  traer  algún  dia  algún  grande  inconveniente. 

El  marqués  de  Pescara  dice  que  quiere  ir  á  Malta  á  ofre- 
cerse al  maestre ,  y  á  mí  me  ha  parescido  bien ;  y  él  llevará 
el  cargo  de  ofrecerle  lo  dicho ,  aunque  demás  desto  se  lo  es- 
crebiré  yo  particularmente. 

p!t  Mándame  V.  M.  por  esta  su  carta  que  envíe  un  buen 
golpe  de  galeras  á  la  costa  de  Cataluña  á  asegurar  los  escor- 
chapines. Si  yo  ejecutase  este  mandamiento ,  estando  espe- 
rando de  hora  en  hora  el  armada  del  turco,  está  claro  que 
hallando  desunidas  las  fuerzas  del  armada  de  V.  M. ,  podría 
pasar  él  con  la  suya  á  emprender  todo  lo  que  quisiese ,  sin 
que  hubiese  quien  le  pusiese  freno  ni  temor  á  lo  que  qui- 
siese emprender;  de  manera  que  cada  dia  me  veo  subjecto  á 
uno  de  dos  notables  daños,  que  es,  ó  no  hacer  lo  que  V.  M. 
me  manda ,  ó  hacerle  algún  grande  deservicio ;  pero  $il  fin 
por  no  parescer  arrogante  ni  atrevido ,  seré  forzado  á  obser- 
var lo  que  quizás  no  conviene ,  y  si  viere  en  la  respuesta 
del  correo  que  despaché  de  Genova  á  20  del  pasado ,  que 
Y.  M.  está  todavía  en  opinión  que  se  me  haga  lo  que  se  me 


275 

escribió,  enviaré  las  galeras  que  se  rae  mandan,  aunque  no 
sé  en  que  se  ha  de  llevar  lo  que  de  acá  hubiese  de  ir. 

El  duque  de  Alcalá  ha  dado  las  cinco  compañías,  las  tres 
que  hablan  quedado  y  las  dos  de  Gaeta,  las  cuales  enviaré 
luego  á  la  Goleta  en  seis  ó  ocho  galeras  para  que  tenga  don 
Alonso  el  cumplimiento  del  tercio  que  pidió ,  y  llevarán  tam- 
bién el  residuo  que  quedó  de  los  sesenta  mil  escudos  del  año 
pasado  y  otros  veinte  mil  de  los  cient  rail  que  del  últirao 
partido  del  duque  de  Alcalá  se  han  cobrado ;  y  si  V.  M.  qui- 
siere que  se  le  envíe  mayor  cuantidad,  mándeme  avisar  de 
ello ,  y  ansí  me  parto  en  esta  hora  sin  haber  pérdida  nin- 
guna de  tiempo  en  lo  mucho  que  habia  que  hacer  aquí  para 
provisión  del  armada ,  y  desde  Sicilia  escrebiré  mas  largo 
á  V.  M.  todo  lo  que  se  ofresciere,  ni  hasta  agora  hay  otra 
nueva  de  la  armada ,  fuera  de  las  que  tengo  enviadas  á 
\ .  M.,  cuya  vida  Nuestro  Señor  guarde  por  muy  largos  años 
como  la  cristiandad  ha  menester.  De  galera  júnelo  á  Gapri 
á  4  de  junio  de  4566.— Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus 
reales  pies  y  manos  besa.— Don  García  de  Toledo. 

Sobre.— A  la  S.  G.  R.  M.  del  rey  nuestro  señor. 


amum 


276 


Carla  original  de  D.  García  de  Toledo  al  señor  Francisco 
de  Eraso,  fecha  de  galera  junólo  á  Capri  á  4  de  junio 
de  1566. 

Manifiesta  los  motivos  de  no  poderse  defender  Malta  con  doce 
mil  hombres. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  ilZQ.J 

Ilustre  Señor  : 

Yo  he  visto  la  caria  de  v.  m.  de  12  de  mayo,  y  en  sus 
particulares  no  diré  en  esta  nada  porque  desde  Sicilia  escri- 
biré largo  lo  que  me  ocurre  y  me  paresce  que  se  debe  hacer. 
En  este  medio,  hágame  v.  m.  merced  de  tener  mucho  su- 
frimiento ,  y  de  pasar  por  lo  hecho  lo  mejor  que  pudiere ,  y 
á  mí  me  ha  dado  mas  pena  de  la  que  podia  imaginarme ,  y 
en  ella  tiene  poca  parle  mi  propiedad. 

No  me  espanto  que  allá  parezca  recia  la  determinación 
que  se  tomó  en  lo  de  Malta ,  y  también  lo  parescerá  lo  de  la 
Goleta;  y  los  que  hablan  en  culpar  las  determinaciones  que 
acá  se  toman ,  tienen  poca  razón ,  porque  los  que  están  en  el 
hecho  veen  lo  que  conviene  ó  no.  Pero  yo  doy  mi  palabra  de 
cumplir  de  aquí  adelante  lo  que  de  allá  se  mandare,  aunque 
el  mundo  se  hunda ,  porque  al  fin  no  quiero  echar  sobre  mí 
tan  pesada  carga;  y  téngame  v.  m.  por  ignorante  si  no  se 
viere  presto  el  servicio  que  hacia  en  poner  sobre  mis  espal- 
das la  murmuración  de  no  querello  ejecutar ,  y  si  viesen  en 
el  término  que  está  lo  de  Malla  no  se  maravillarian  de  que 
doce  mil  hombres  no  la  puedan  defender.  Y  si  paresce  que 
siendo  pequeña  la  armada  eran  bastantes  doce  mil  hombres 


277 

para  combatir  con  la  gente  della  en  campaña ,  cngáñanse  por 
muchas  causas  y  dejan  de  considerar  con  la  facilidad  que  los 
enemigos  podrian  traer  en  un  dia  y  una  noche  muy  grueso 
golpe  de  caballería ,  para  con  ella  y  su  infantería  deshacer  y 
degollar  la  nuestra ;  y  si  se  meten  en  el  Burgo  y  San  Miguel 
serian  perdidos  por  infinitas  causas  que  allá  se  han  escrito, 
y  la  principal  por  ser  los  montes  de  entorno  aptos  á  que  con 
sola  su  artillería,  hallándose  sin  murallas  ni  traviesas,  como 
están  estos  dos  lugares  tan  subjectos  á  ella ,  pudiesen  aca- 
barlos, ni  yo  ni  los  demás  éramos  obligados  á  adevinar  que 
el  armada  había  de  ser  pequeña ,  escribiendo  de  todas  partes 
que  era  poderosa ;  pero  por  pequeña  que  sea ,  si  viene  sobre 
Malta  y  la  gente  está  dentro ,  se  verá  por  obras  que  no  éra- 
mos ciegos  los  que  allí  fuimos,  ni  el  caso  de  tanta  dubda  que 
no  bastase  á  juzgar  la  determinación  que  se  tomó.  Y  si  el 
armada  era  grande  convenia  hacer  lo  que  se  hizo ,  y  si  pe- 
queña ni  mas  ni  menos ,  porque  mas  temor  le  pusiera  ver  la 
de  V.  M.  bien  proveída  de  gente ,  que  no  ver  en  Malla  el 
dicho  número.  Estas  son  materias  que  no  se  sufre  tractarlas 
por  cartas.  Si  Dios  me  diere  salud,  lo  cual  dudo  mucho  por- 
que me  tiemblan  ya  los  dos  brazos  y  la  pierna  izquierda,  yo 
iré  ahí  á  aclarar  sobre  estas  materias  lo  que  debo  hacer,  por- 
que no  me  está  bien  hallarme  cada  dia  en  confusiones  de  tan 
grandes  hechos.  Y  he  hablado  tan  largo  porque  también  don 
Antonio  me  escribió  en  la  misma  conformidad  de  lo  que  v.  m. 
dice  en  su  carta,  al  cual  mande  v.  m.  mostrar  esta,  y  cer- 
tifíquele  que  yo  he  hecho  en  estos  casos  lo  que  conviene  á 
Dios,  y  al  rey  y  á  la  seguridad  de  sus  estados ,  quitándoles 
sus  ejércitos  del  peligro  de  ser  manifiestamente  degollados. 
Pero  yo  torno  á  prometer  de  nuevo  que  de  aquí  adelante  seré 
mero  ejecutor  de  lo  que  de  allá  viniere ,  ora  sea  á  tiempo ,  ó 
fuera  del.  Y  Nuestro  Señor  guarde  la  Ule.  persona  de  v.  m. 


278 

como  desea.  De  galera  juncto  á  Gapri  á  4  de  junio  1566. — 
Servidor  de  v.  m.-^Don  García  de  Toledo. 

Sobre  de  la  carta. — AI  Ule.  señor  el  señor  Francisco  de 
Eraso,  del  Consejo  de  S.  M.  y  su  secretario. 


Copia  de  la  caria  que  S.  M.  escribió  á  D.  García  de  To- 
ledo del  Escorial  á  4  de  junio  1566. 

Se  conforma  en  no  hacer  este  aíio  la  empresa  de  Argel— Licén- 
ciamiento de  infantería  italiana -'Artillería. 

(Archivo  general  de  Símancas.^^Estado ,  legajo  núm,  1130.) 
El  Rey. 

lile.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  de  Sicilia  y 
capitán  general  de  la  mar:  Vuestras  cartas  de  veinte  de 
mayo  rescibí  á  treinta  del  mismo,  y  con  otro  que  partirá 
brevemente  se  os  responderá  particularmente  á  ellas ,  y  en 
esta  se  hará  solamente  á  lo  mas  principal. 

Como  veríades  por  mi  carta  de  26  de  marzo  el  presu- 
puesto que  se  tovo  para  que  se  emprendiese  lo  de  Argel, 
fué  entendiendo  quel  armada  del  turco  no  bajaría  este  vera- 
no cargando  tan  poderosamente  por  la  parte  de  Hungría,  y 
ya  que  lo  hiciese  no  seria  en  el  número  que  por  estos  últi- 
mos avisos  paresce.  Pero  visto  todo  lo  que  cerca  deslo  apun- 
táis y  consideráis ,  y  las  dificultades  que  os  ocurren ,  espe- 
cialmente estando  el  tiempo  tan  adelante,  y  habiendo  tan 
poca  forma  para  arrestar  y  tomar  allá  á  nuestro  sueldo  las 
quince  mil  toneladas  de  navios  de  alto  bordo ,  y  que  resci- 
bistes  tan  tarde  el  dicho  despacho ,  de  donde  dependía  el 
hacerse  las  vituallas  y  otras  provisiones,  nos  ha  parescido  y 


279 

paresce  lo  mismo  que  á  vos  no  embargante  que  acá  estaba 
en  orden  y  á  punto  todo  lo  necesario ,  y  así  nos  habernos 
resuelto  en  diürirlo  y  dejarlo  para  cuando ,  placiendo  á  Nues- 
tro Señor  se  haya  mejor  comodidad,  que  aunque  es  ansí 
que  á  las  primaveras  siempre  se  pubUca  que  arma  el  tur- 
co,  y  es  de  creer  que  (1)  lo  mismo  á  principio  del  año 
que  viene ,  podría  ser  que  no  faltase  alguna  ocasión  y  co- 
modidad, como  muy  bien  lo  decís ,  para  que  entonces  se  em- 
prendiese, que  no  lo  deseo  poco,  por  el  bien  universal  de 
la  cristiandad  y  conservación  de  nuestros  estados,  y  por  las 
otras  particulares  y  utilidades  que  se  podrían  seguir ;  y  cuan- 
do os  pareciere  nos  podréis  advertir  y  avisar  de  lo  que  cei?^ 
ca  desto  os  ocurriere ,  según  el  estado  en  que  estuvieren  las 
cosas  y  los  efectos  que  este  año  hiciere  la  dicha  armada, 
para  que  miremos  en  ello  y  nos  podamos  mejor  resolver. 

Yo  escribo  al  embajador  Figueroa  ,  como  veréis  por  la 
copia  de  su  carta  que  va  con  esta ,  que  luego  haga  despe- 
dir y  licenciar  los  tudescos  que  habían  de  ir  á  Malta  y  la  Go- 
leta como  os  paresce ,  y  que  si  demás  de  los  dos  rail  italia- 
nos que  pensábades  embarcar  en  las  galeras  de  la  coronelía 
de  Césaro  de  Ñapóles  hubiesen  quedado  algunos,  también  los 
despida ;  y  la  misma  orden  se  da  para  lo  de  los  dos  mil  tu- 
descos que  últimamente  habíamos  mandado  de  nuevo  levan*» 
tase  el  conde  Juan  Bautista  de  Arcos ,  y  que  se  les  tome  la 
muestra  y  se  fenezca  la  cuenta  con  lodos ,  y  se  les  pague 
lo  que  justamente  hubieren  de  haber ,  de  manera  que  no 
les  corra  mas  sueldo,  y  que  señaladamente  lo  haga  del  di- 
nero que  escribís  que  le  dejastes  por  esto ,  y  si  aquello  no 
bastare,  lo  tome  de  lo  que  se  le  ha  después  remitido  ^qi 
cambio. 

.  (1)  Asi  en  el  ras. 


280 

Ítem  le  ordenamos  que  también  despida  los  nuetié''ftéf5í-' 
víos  que  hiciste  arrestar ,  y  que  les  pague  lo  que  hubieren 
de  haber,  y  que  si  después  hicisles  tomar  otros  allí,  ó  dejas- 
tes  orden  para  ello ,  haga  lo  mismo ,  pues  ya  no  son  menes- 
ter ;  y  si  en  otras  partes  vos  habéis  embargado  otros ,  pro- 
veeréis que  se  despidan  y  de  la  misma  causa. 

Y  paréceme  muy  bien  lo  que  pensábades  proveer ,  para 
que  Sigismundo  de  Gonzaga  levante  mil  y  quinientos  italia- 
nos para  Gerdeña ,  y  así  le  escribo  que  luego  lo  ponga  en 
efecto ,  y  se  proveen  demás  de  la  paga  que  dejastes  para 
ellos  doce  mil  escudos  para  llevarles  otras  dos  de  respecto 
porque  no  hagan  daño  en  aquel  reino ,  que  para  la  estada 
y  vuelta  bien  son  necesarios. 

Todas  las  naos  y  escorchapines  que  acá  estaban  arresta- 
dos que  subirían  de  las  quince  mil  toneladas  que  se  hacia 
cuenta  que  eran  menester ,  habemos  mandado  que  se  despi- 
dan ,  y  en  cuanto  toca  á  las  vituallas  que  se  entretengan  y 
guarden  los  bizcochos,  harinas,  trigo  y  legumbres  y  todas 
las  otras  cosas  que  se  pudieren  conservar  y  no  estuvieren 
sujetas  á  corrupción  ni  diminución,  que  de  las  tales  habe- 
mos proveído  se  disponga,  ó  tornándolas  á  vender,  ó  que 
con  volnntad  do  las  partes  se  deshagan  los  conciertos  que 
estuvieren  hechos ,  aunque  sea  con  alguna  pérdida ,  ó  que 
se  envíen  para  la  provisión  del  Peñón ,  Melilla  y  Oran ,  y 
se  den  á  la  gente  en  cuenta  de  su  sueldo. 

Y  habemos  proveído  que  la  nao  del  artillería  que  estaba 
cargada  en  Málaga  y  había  de  ir  á  Mesína  se  detenga  si  no 
fuese  ya  partida ,  y  que  la  pólvora  que  iba  en  las  galeras  de 
Don  Alvaro  se  deje  en  Barcelona  ó  Rosas ,  si  nuestro  avi- 
so le  tomare  á  tiempo,  y  sino  allá  haréis  que  se  ponga  á  re- 
caudo, y  que  en  las  mismas  galeras  se  vuelva  acá. 

En  la  fábrica  de  las  galeras  que  se  hacen  habemos  man- 


281 

dado  dar  priesa  para  que  siendo  posible  se  armen  las  que  es- 
cribís para  el  año  que  viene,  y  lo  de  los  docienlos  panaderos 
y  horneros  que  habían  de  bajar  de  Alemana  al  estado  de  Mi- 
lán habernos  ordenado  que  también  cese.  Del  Escurial  á  4 
de  junio  4566  años. 


Copia  de  la  instrucción  del  gran  maestre  para  el  comen- 
dador  Maldonado,  fecha  en  Malta  á  8  de  junio  1566. 

(Archivo  general  de  Simancas . — Estado,  legajo  núm.  iiZO.J 

Besar  las  manos  al  Ill™°.  marqués  de  Pescara  y  deeille 
de  nuestra  parte  que  le  beso  las  manos  muchas  veces ,  y  lo 
que  me  he  holgado  de  que  Su  S.  111"^.  haya  de  venir  á  esta 
tierra  donde  le  serviré  yo  y  todos  los  que  estamos  en  ella. 

El  señor  D.  García  nos  ha  inviado  á  decir  con  el  señor 
Juan  Andrea  que  si  queremos  en  dinero  contante  los  16  mil 
escudos  que  se  nos  han  de  dar  en  provisiones  y  municiones 
de  los  20  mil  que  S.  M.  nos  ha  hecho  merced  para  esto 
que  se  nos  darán  en  dinero ,  y  que  asimismo  se  pagarán 
luego  los  un  mil  que  nos  debe  la  regia  corte ,  los  cuales  17 
mil  tenemos  necesidad  en  la  presente  coyuntura  se  empleen 
en  lo  que  lleváis  por  un  memorial  aparte  que  procurareis 
se  haga  como  allí  lo  decimos.  Sobre  venir  la  infantería  que 
S.  M.  ha  ordenado  que  venga  á  ponerse  aquí  para  hacer 
oposición  á  la  armada  enemiga ,  hemos  dicho  al  señor  Juan 
Andrea  que  pues  que  S.  M.  asi  lo  ordena  que  nos  parece  se 
debe  seguir  su  mandamiento. 

Háse  de  considerar  sobre  esto  muchas  cosas ,  y  en  es- 
pecial que  aquí  hay  falla  de  todo  y  conviene  porque  esta- 
mos ya  muy  adelante  que  esta  gente  venga  con  todo  lo  ne- 


282 

cesario ,  y  en  especial  cosas  de  comer ,  y  que  se  advierta 
que  si  la  armada  enemiga  es  superior  á  la  nuestra  que  sin 
golpe  de  espada  nos  podría  sitiar  y  forzar  á  lo  que  quisie- 
se ,  y  por  esto  no  me  parece  que  bastará  la  provisión  que 
dice  el  señor  Juan  Andrea  que  traerá  para  los  cuatro  me- 
ses ,  pues  siempre  vienen  á  menos  estas  cosas ,  y  no  hace 
daño  lo  que  sobra.  Consultareis  sobre  esto  particularmente 
con  el  señor  marqués. 

Háse  de  advertir  que  aquí  no  hay  carne  ninguna,  ni 
vino,  ni  leña,  ni  comodidad  detraer  nada  desto,  y  asimismo 
que  es  muy  necesario  venga  esta  gente  con  algunos  aparejos 
de  tiendas ,  pues  será  necesario  se  alojen  en  campaña ,  por- 
que en  estas  habitaciones  no  hay  lugar  como  sabéis;  todavía 
se  procurará  toda  la  comodidad  que  se  pueda ,  aunque  ve- 
mos que  será  bien  poca. 

No  se  olviden  cosas  para  el  hospital,  como  son  cirujanos, 
médicos ,  especierías  y  drogas ,  lechos  y  todas  las  otras  á 
este  propósito,  que  aquí  á  causa  que  el  pueblo  ha  inviado  su 
ropa  á  Secilia  no  se  halla  un  solo  colchón. 

Porque  como  se  vé  y  sabéis  las  necesidades  de  la  reli- 
gión son  tantas  y  crecen  cada  dia  de  manera  que  no  pode- 
mos cuasi  suplillas ,  y  así  tampoco  podemos  excusar  de  dar 
pesadumbre  á  Su  Ex.^  á  quien  suplicareis  de  mi  parte  y  de 
la  religión  nos  haga  merced  de  prestarnos  hasta  diez  rail 
escudos,  ó  sea  á  cuenta  de  S.  M.  ó  de  la  suya,  si  se  hallare 
con  esta  comodidad  ,  y  para  seguridad  desto  os  enviaremos 
luego  procura  para  obligar  los  bienes  de  la  religión.  Procu- 
rad que  nos  haga  esta  merced  el  señor  D.  García  con  toda 
instancia,  que  el  pagamento  se  hará  donde  y  cuando  S.  E.* 
mandara. 

Ya  habéis  entendido  los  avisos  que  me  ha  traído  nues- 
tra galera ,  y  como  se  puede  creer  que  no  se  hará  armada, 


283 

según  lo  que  hasta  agora  entendemos,  para  hacer  efecto  nin- 
guno en  tierra,  y  podria  por  esta  causa  estorbarse  la  veni- 
da de  esa  infantería ,  tomándose  nueva  resolución ,  en  tal 
caso  por  las  necesidades  arriba  dichas  y  fábricas  en  que  te- 
nemos la  mano  nos  convernía  mas  viniesen  en  contante  los 
arriba  dichos  17  mil  escudos,  y  no  seria  menester  los  em- 
pleásedes  conforme  al  memorial  que  con  esta  va ,  antes  os 
encargamos  que  procuréis  de  habellos  en  contante,  y  los 
daréis  á  Rafael  Cresino;  pero  si  todavía  verná  la  dicha  in- 
fantería, procurad  que  se  conviertan  en  las  cosas  que  lleváis 
por  memoria.  Lo  demás  que  se  ofrece  acordaros,  remitirnos 
á  vuestra  discreción ,  pues  de  todo  vais  bien  informado. 
Nuestro  Señor  os  lleve  y  traya  á  salvamento.  En  Malta  á  8 
de  junio  1566. 


Copia  de  carta  oriifinal  del  gran  maestre  á  S.  M. ,  fecha 
en  Malla  á  8  de  junio  de  1566. 

Que  se  cumplirá  la  voluntad  de  S.  M.  sobre  poner  en  aquella 
isla  6  ü  8  mil  hombres— Le  agradece  la  espada  que  de  su  parte  le 
había  dado  el  comendador  Maldonado  —  Armada  del  turco  —  Pocas 
noticias  de  Constantinopla. 

f  Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1131.) 

S.  M.  Cat." 

En  este  puncto  ha  llegado  aquí  el  señor  Joan  Andrea  de 
Oria  con  una  galera  enviado  del  señor  D.  García  de  Toledo 
desde  Mesina,  donde  ha  llegado  con  parle  del  armada  de 
V.  M. ,  el  cual  me  ha  scripto  y  á  boca  me  ha  dicho  Juan 
Andrea  que  la  voluntad  de  V.  M.  era  que  viniesen  aquí  seis 


284 

ó  ocho  mil  soldados  para  la  defensa  y  conservación  desta  isla 
y  religión ,  y  aunque  á  los  inconvenientes  que  al  señor  don 
García  y  á  mi  nos  parecía  que  habia  en  esto ,  he  escripto 
particularmente  á  V.  M.  siguiendo,  el  deseo  que  siempre  he 
tenido  y  ha  tenido  esta  religión  de  obedescer  y  seguir  su  vo- 
luntad y  mandato,  escribo  al  señor  D.  García  que  haga  lo 
que  V.  M.  manda ,  que  yo  y  esta  orden  estamos  dispuestos 
de  una  voluntad  á  que  en  todo  se  cumpla ,  porque  cuando 
me  faltase  este  y  tantos  otros  amparos  como  recibimos  cada 
dia  esta  religión  y  yo  de  V.  M. ,  el  notable  y  alto  favor  y 
merced  que  V.  M.  ha  sido  servido  de  hacerme  de  la  spada 
que  el  comendador  Antonio  Maldonado  me  ha  dado  de  parte 
de  V.  M.  me  da  esfuerzo  para  que  obedesciendo  sus  manda- 
mientos espere  y  tenga  por  felicidad  grande  cualquiere  su- 
ceso que  por  mí  pase ;  y  para  lo  que  yo  debo  y  deseo  ser- 
vir á  V.  M. ,  será  siempre  lo  menos  el  morir.  Y  porque  ha 
poco  que  llegó  el  comendador  Maldonado ,  y  que  mas  par- 
ticularmente responderé  en  el  grado  que  he  tenido  la  merced 
grande  que  V.  M.  me  ha  hecho  y  á  esta  religión,  en  esta 
no  se  me  ofresce  decir  mas  de  que  por  entender  con  mas 
certeza  lo  que  hacia  larmada  del  turco  volví  á  enviar  á  los 
XX  del  pasado  una  de  mis  galeras  en  levante ,  la  cual  llegó 
aquí  de  vuelta  dos  dias  ha  y  sobre  Candía  tomó  dos  galeotas 
de  XIX  y  xiv  bancos  con  toda  la  gente',  y  dellas  y  de  lo  que 
ha  sabido  en  otras  islas  entiendo  que  todavía  estaba  la  ar- 
mada en  Xío  aguardando  respuesta  del  turco,  el  cual  por 
haber  adolecido  habia  hecho  alto  después  de  partido  de  Cons- 
tantinopla,  de  donde  no  tengo  cartas  de  ninguna  de  las  es- 
pías que  allá  tengo  muchos  dias  ha ,  y  tengo  recelo  no  estén 
embarazados  los  caminos  por  tierra ,  que  para  saber  si  salen 
mas  galeras  ó  otros  navios  las  aguardo  con  deseo.  De  puncto 
en  puncto  escribiré  á  V.  M.  lo  que  se  ofrecerá ,  cuya  S.  C.* 


285 

real  persona  guarde  Nuestro  Señor  con  felicísimos  sucesos. 
En  Malta  vüj  de  junio  1566. — De  V.  S.  C*  M.  humilde  ser- 
vidor.— El  gran  maestre. — F.  Jehan  de  Vállele. 

En  el  pedazo  de  papel  que  hay  del  cierre,  tiene  escrito 
de  letra  del  rey  con  lápiz:  "Antonio  Pérez ,  que  se  junle  esta 
»  con  otras  desle"  "''"'* 


Dentro  de  la  carta  anterior  hay  esta  otra  original  del  mis- 
tno  maestre  á  S.  M.  sobre  el  obsequio  de  la  espada,  da- 
ga y  talabarte.  Malta  12  de  junio  de  1566. 

Sacra  Mag.»  Gat." 

A  las  cartas  y  despachos  que  el  comendador  Antonio 
Maldonado  me  ha  traido  de  V.  M.  he  respondido  parti- 
cularmente. Quédame  solo  en  esta  hacello  al  notable  favor 
que  V.  M.  ha  sido  servido  de  hacerme  de  la  spada,  daga 
y  talabarte  que  de  su  parte  me  ha  dado  el  dicho  Mal- 
donado,  que  ha  sido  don  tan  alto  y  tan  estimado  de  mí, 
que  yo  no  basto  á  comprenderlo,  ni  poder  especificar  en  el 
grado  que  yo  lo  he  tenido  y  debo  tener ;  y  aunque  entiendo 
muy  bien  que  en  mí  no  hay  tantos  méritos  como  senefiea 
esto  y  las  palabras  que  de  parte  de  V.  M.  me  ha  dicho  el 
comendador  Maldonado ,  entiendo  que  los  príncipes  tan  ge- 
nerosos y  tan  grandes  como  V.  M. ,  así  como  con  su  valor 
adquieren  y  ganan  las  victorias,  favorecen  con  diversas  ma- 
neras sus  ministros  y  subditos  como  lo  soy  yo  de  V.  M. ,  y  tan 
verdadero  y  deseoso  de  acertar  en  su  servicio ,  que  sola  esta 
voluntad  es  por  lo  que  en  alguna  manera  cabe  en  mí  parte 
de  la  merced  que  V.  M.  me  ha  hecho ,  á  quien  certifico  que 
aunque  no  pueda  aumentarse  el  deseo  que  yo  tengo  y  he  te- 


286 

nido  siempre  de  acertar  en  su  servicio,  que  para  mas  mi  sa- 
tisfacción en  eslo  sentiré  la  brevedad  de  mis  dias ,  y  no  cierto 
tanto  por  vivir  ya ,  como  porque  deseo  mostrar  en  alguna 
manera  y  en  cualquiera  ocasión  la  gratitud  y  reconocimiento 
que  un  hombre  de  mis  prendas  puede  á  tanto  favor,  tanto 
beneficio  y  merced  como  de  V.  M.  he  recibido  y  esta  religión, 
y  recibimos  cada  dia.  Quise  que  Maldonado  me  diese  esta 
espada  congregado  el  consejo  desta  orden  y  todos  los  caba- 
lleros della  para  que  mas  nos  moviese  á  todos  de  procurar 
con  todas  nuestras  fuerzas  servirlo  á  V.  M.  con  nuestras 
vidas  y  personas ,  y  para  los  que  vernán  les  mueva  mas  á 
esto,  demás  de  otras  memorias  que  dello  se  hará  como  lo 
debemos.  He  querido  se  ponga  esta  pieza  en  el  común  tesoro 
desta  orden ,  donde  perpetuamente  sea  tenida  y  conservada 
como  reliquia  y  joya  muy  preciada ,  pues  de  las  cosas  hu- 
manas no  se  puede  tener  de  cosa  mas  cuenta  que  venir  de 
mano  de  V.  M.  Nuestro  Señor  Dios  guarde  á  V.  M.  y  con- 
serve con  aquella  felicidad  que  la  cristiandad  ha  menester, 
pues  todos  vemos  es  solo  V.  M.  el  protector  y  defensor  de  su 
honor  en  todas  cosas ,  y  conceda  gracia  á  mí  y  á  esta  reli- 
gión que  alcancemos  ocasión  en  que  conozca  V.  M.  que  la 
obligación  que  tenemos  á  su  servicio  la  reconocemos  con 
nuestras  propias  vidas ,  pues  no  podemos  con  otra  cosa.  En 
Malla  xij  de  junio  1566.  — De  V.  S.  C.^"  iMaj.**  muy  hu- 
milde servidor. — El  gran  maestre. — F.  Jehan  de  Vállete. 
Sobre  de  la  carta.— k  la  S.  Maj.''  Cat." 


287 


Carta  autógrafa  de  D.  Alvaro  de  Baian  á  D.  Garda  de 
Toledo.  Genova  8  de  junio  de  1566. 

El  mal  tiempo  no  le  ha  permitido  salir  á  la  mar. 
(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

lllrao.  Señor:  Después  que  escribí  á  Vuesa  E.*  volvió  el 
tiempo  al  levante  jaloque  y  no  ha  hecho  sino  llover  y  una 
mar  como  de  invierno,  que  ha  sido  la  causa  de  no  haber  par- 
tido ,  aunque  ha  cinco  dias  que  estoy  despalmado  y  presto  y 
las  tres  naos  que  han  de  llevar  los  soldados  también  están 
prestas ,  y  porque  no  se  tarden  las  llevaré  remolcando  hasta 
Lerzo:  en  todo  se  dará  la  diligencia  posible.  De  las  galeras 
del  duque  de  Saboya  es  venido  un  mensajero  y  entiendo  por 
k)  que  escribe  Leni  que  no  vendrán.  Si  Vuesa  E.*  fuere  par- 
tido de  Mesina  antes  que  yo  llegue ,  le  suplico  deje  orden 
que  se  den  algunos  bastimentos  á  estas  galeras.  La  pólvora 
y  arroz  que  Vuesa  E.'  dejó  aquí  llevo  con  mas  otros  docien- 
tos  quintales  de  pólvora  que  truje  de  Málaga  para  consinar 
á  quien  Vuesa  E.*  ordenare.  Y  guarde  Nuestro  Señor  la 
Illma.  persona  de  Vuesa  E.'  y  su  estado  acreciente  como  sus 
senidores  deseamos.  De  Genova  á  vin  de  junio  1566. — 
Besa  las  manos  á  Vuesa  E.* — Don  Alvaro  de  Bazan. 

Sobre.  —  Al  Illmo.  señor  mi  Sr.  D.  García  de  Toledo, 
capitán  general  de  la  mar  y  visorey  en  el  reino  de  Sicilia. 


288 


Copia  de  carta  del  gran  maestre  al  marqués  de  Pescara, 
fficha  en  Malla  á  9  de  junio  de  i  566. 

Se  alegra  de  su  ida  á  aquella  isla. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  4 150 .y 

III.*"*  Señor í 

El  Sr.  Juan  Andrea  me  ha  dado  la  carta  de  V.  S.  de  6 
desle  y  con  ella  me  he  holgado  tanto,  que  ha  hartos  días 
que  no  he  recibido  mas  contentamiento  por  mil  causas  y  se- 
ñaladamente por  ver  la  afielen  con  que  viene  V.  S.  á  ha- 
cerme merced  y  á  esta  religión  y  á  defendernos  destos  fal- 
dudos,  con  cuya  111.™'  persona  no  me  espantaría  otra  tanta 
mas  armada  que  la  pasada ;  y  pues  placiendo  á  Dios  nos  ve- 
remos tan  en  breve,  y. que  el  señor  Juan  Andrea  va  infor- 
mado de  lo  que  por  acá  haya  que  avisar  á  V.  S.,  no  diré 
en  esta  mas  de  hacer  que  viene  á  parte  á  donde  hay  toda  la 
esterilidad  y  falta  de  todas  las  cosas ,  y  que  es  muy  necesa- 
rio no  la  haya  de  aquellas  que  no  se  pueden  excusar,  aun- 
que el  Sr.  D.  García  es  tan  prudente  que  lo  mandará  pro- 
veer todo  como  conviene.  Y  en  lo  demás  «i  verná  acá  la  ar- 
mada enemiga,  aun  hallará  en  estos  viejos  años  V.  S.  quien 
con  toda  voluntad  le  lerna  compañía  á  dar  la  batalla  en  cam- 
paña ,  armado  y  favorescido  de  un  generoso  don  de  una  es- 
pada que  S.  M.  me  ha  hecho,  sinificando  que  el  que  es  se- 
ñor de  las  victorias  puede  favorescer  á  sus  ministros  y  sub- 
ditos como  lo  soy  yo  de  S.  M.  Católica ,  para  que  mas  le 
sirvamos.  Nuestro  Señor  me  dé  gracia  que  como  lo  deseo 
pueda  hacerlo,  y  guarde  etc.  De  Malta  9  de  junio  1566. 


^89 

Dentro  do  Pata  car-  r        Relación  de  las  municiones  que 
ta  se  halla  la  relación  '      •  i      •  , 

siguiente:  {  pide  el  gran  maestre. 

Bastante  quantilá  de  vino,  aceto,  olio  e  formaggio,  fave, 
chichieri ,  riso ,  tonina  e  sarde  in  quanlitá ,  sogiiole  e  barrile 
de  acqua. 

Barcone,  mezza  dozena  per  condur  acqua  dalla  Marza  a 
le  cislerne. 

Bizcotto  piu  quantilá  che  si  puotrá  per  non  esserlc,  ne 
legna  ne  acqua. 

Medicina  de  ogni  sorte. 

Prune  et  pasóle  e  confetura  per  i  malati. 

Chirugie. 

Bombardieri. 

Maestri  d'ascia  per  li  ripari. 

Legnami  e  lavóle  per  li  ripari. 

Zappe,  picone,  mannaree  chiavagione  grose  e  niinutc. 

Piombo. 

Artillería  móntala.  Miccio  gran  quantilá. 

Piche  e  archibuggi  di  respetto.  Pignate  di  fuoco.  CoflFe. 


Carla  original  de  D.  Alvaro  de  Bazan  á  D.  Garda  de  To- 
ledo. De  galera  sobre  la  Especie  il  de  junio  de  1566. 

Le  participa  su  salida  de  Genova  con  la  infantería. 

Illmo.  Señor: 

Desde  Genova  he  scripto  á  V.  E.  dos  veces,  y  lo  que 
ahora  se  ofrece  de  avisar  á  V.  E.  es  que  por  haber  hecho 
Tomo  XXX.  19 


29Q 

muy  frescos  jaloques  y  levantes  no  pude  partir  de  Genova 
liasta  los  xu  de  este  mes ,  y  las  naos  que  habían  de  llevar 
la  infantería  estaban  allí ,  y  ansí  truje  remolcando  las  dos 
hasta  XXV  millas  de  Genova  donde  tornaron  á  ventar  los  ja- 
loques y  arribaron  á  Puertopin.  Yo  vine  con  las  galeras  á 
la  Specie ,  proejando  con  harto  trabajo  con  designo  de  lle- 
var la  gente  á  las  naos  á  donde  las  hallase,  y  Uniéndola  ya 
embarcada  parecieron  á  la  vela  cerca  de  puerto  Veneris: 
anochecióles  ánles  de  dar  fondo.  Entró  la  una,  que  era  arra- 
gosesa,  y  la  Vizcaína  na  surgió  ni  habemos  sabido  á  donde 
fué  á  parar,  porque  anochecido  resfrescó  mucho  el  tiempo;  y 
por  ser  la  nao  arragosesa  grande  y  de  hasta  novecientos  to- 
neles y  parecer  que  podría  llevar  bien  la  gente,  la  he  embar- 
cado en  ella,  que  serán  menos  de  ochocientos  hombres,  y 
van  en  las  galeras  otros  setecientos.  Mos  de  Leni  vino  an- 
tier que  no  ha  sido  poca  ayuda  para  llevar  esta  gente.  Todo 
está  á  punto :  si  esta  noche  abonanza  el  tiempo,  partiremos, 
y  lo  que  pudiere  guardarle  la  conserva  lo  haré  como  V.  E. 
manda ,  y  ansí  en  el  llevar  la  gente  á  Cerdeña ,  como  en  el 
ir  de  allí  en  busca  de  V.  E. ,  me  daré  toda  la  prisa  posible. 
Y  guarde  Nuestro  Señor  la  lUma.  persona  de  V.  E.  con  el 
acrecentamiento  de  estado  que  sus  servidores  deseamos.  De 
galera  sobre  la  Specie  xvii  de  junio  mdlxvi  años. 


V     ;t  b\j  oVi.  De  su  letra. 

Besa  las  manos  á  V.  E. — Don  Alvaro  de  Bazan. 
Sobre.  —  Al  lllmo.  Sr.  mi  señor  D.  García  de  Toledo, 
capitán  general  de  la  mar  y  visorey  en  el  reino  de  Sicilia. 


291 


Carta  original  del  marqués  de  Pescara  á  D.  García  de 
Toledo.  Malla  22  de  junio  de  1566. 

Le  avisa  su  llegada  á  Malta. 

III.""  Señor: 

Ayer  tarde  llegamos  aquí,  y  todos  mareados  por  el  tra- 
bajo que  nos  dio  la  mar.  Heme  visto  con  el  gran  maestre  y 
en  él  he  hallado  resolución ,  en  caso  que  venga  la  armada, 
de  salir  en  campaña  á  pelear,  de  manera  que  muy  acertada 
vendría  á  ser  la  merced  que  suplico  á  V.  S.  111."*  para  que 
me  la  hiciese  de  darme  algunos  caballos  de  la  milicia  dése 
reino ;  y  aunque  yo  no  he  visto  ni  considerado  bien  esta 
plaza  por  no  haber  tenido  tiempo  todavía,  pues  así  paresce 
al  gran  maestre  de  salir  en  campaña  á  combatir ,  parésce- 
me  que  debe  ser  lo  mas  acertado ,  y  así  no  puedo  dejar  de 
tornar,  por  lo  que  cumple  al  servicio  de  S.  M.,  de  suplicar 
como  suplico  á  V.  S.  III.™*  me  mande  dar  á  lo  menos  ciea 
de  los  dichos  caballos ,  pues  como  prudentísima  que  es,  con 
la  resolución  que  ha  tomado  el  maestre ,  puede  muy  bien 
considerar  de  cuanto  servicio  serán  á  S.  M.  y  al  bien  desle 
negocio  las  dichas  cien  celadas.  Aquí  no  hay  tampoco  leña, 
de  manera  que  el  grano  y  la  harina  que  he  traído  conmigo 
parésceme  ser  por  demás.  Suplico  á  V.  S.  111."*  que  si  hu- 
biere en  esto  algún  remedio  lo  mande  dar.  Estas  dos  cosas, 
por  ver  yo  que  importan  mucho,  las  suplico  tan  de  veras. 
Guarde  Nuestro  Señor  la  III."*  persona  y  estado  de  V.  E. 
como  se  desea.  De  Malta  á  22  de  junio  1566. 


292 

De  su  letra. 

Aquí  me  dice  el  gran  maestre  que  no  hay  mas  de  dos 
mil  escudos  para  la  forlificacion  y  lo  mandé  proveer  luego, 
pues  pienso  del  lunes  adelante  hacer  que  los  tudescos  acu- 
dan á  la  labor  pagándoselo,  y  también  de  inviarme  mas  di» 
ñero  para  la  paga  de  la  gente ,  pues  si  la  armada  viene ,  y 
que  tiene  tanta  experiencia  podrá  considerar  cuan  importan- 
te es  en  semejantes  tiempos  poder  socorrer  los  soldados  con 
dinero ,  y  no  soy  yo  tan  poco  platico  de  la  necesidades  de 
S.  M.  (1).  acá  de  man- 

dar que  se  gaste  si  no  fuere  en  cosas  mas  que  necesarias. 

Besa  las  manos  á  V.  S.  111.""  su  servidor  el  marqués  de 
Pescara. 

Sobre. — Al  111."*  señor  el  señor  D.  García  de  Toledo, 
visorey  de  Sicilia  y  capitán  general  de  la  mar  por  S.  M. 


Carla  original  del  marqués  de  Pescara  á  D.  García  de  To- 
ledo. Malta  23  de  junio  de  1566. 

Le  pide  algunas  cosas  necesarias  para  la  infantería  de  su  mando. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.J 

Ii.L.""  Señor: 

Yo  he  hallado  esta  isla  tan  falta  de  todo  lo  que  es  me- 
nester como  V.  S.  111.""  lo  sabe  mejor  que  yo.  En  ejecución 

(1)  Aqvii  hay  unas  palabras  que  no  se  pueden  leer. 


293 

de  la  orden  que  S.  M.  rae  dio,  he  procurado  que  conforme  á 
la  voluntad  y  deseo  del  maestre  se  dé  toda  la  prisa  que  fue- 
re posible  á  la  fortificación  nueva,  y  que  los  tudescos  por 
precio  justo  ayuden  lo  mas  que  se  pudiere ,  para  lo  cual  fal- 
tando dinero  según  el  maestre  me  dice ,  me  ha  parecido  acor- 
dar á  V.  S.  que  si  del  que  S.  M.  ha  mandado  dalle  para 
esta  fortificación,  como  acordé  en  Mesina ,  se  pudiere  agora 
enviar  lo  que  queda ,  seria  muy  á  propósito ,  pues  fallando 
dinero  se  podrá  hacer  mal  como  V.  S.  III.""  vée ;  y  porque 
padesceria  mucho  la  gente  labrando  de  dia  al  sol  y  la  noche 
estando  al  sereno  recio  de  esta  tierra,  habiendo  rogado  al 
señor  Juan  Andrea  que  me  acomodase  de  algunas  tiendas  der- 
baj  de  las  galeras  de  S.  M.  para  abrigar  estos  tudescos  que 
han  de  labrar,  me  ha  respondido  que  no  puede  hacello  sin 
orden  de  V.  S.,  á  la  cual  suplico  que  pues  este  invion  hará 
tanto  al  caso  para  lo  que  S.  M.  desea,  me  haga  merced  que 
se  envíe  comodidad  para  hacer  tantas  tiendas  que  basten  á 
poder  cubrir  la  noche  los  tudescos  que  la  traen  el  dia,  por- 
que de  otra  manera  será  imposible  que  puedan  resistir  a] 
trabajo  como  lo  he  dicho  al  señor  Juan  Andrea  mas  larga- 
mente, y  para  hacer  esto  es  necesario  muy  poco  recaudo. 

Los  dineros  que  truje  para  la  paga  de  esta  gente  ya  V.  S. 
111."'  lo  sabe,  y  mejor  que  yo,  si  bastan  para  pagalla,  por 
lo  cual  como  cosa  en  do  va  tanto ,  caresciendo  esta  isla  de 
todo  lo  demás ,  le  suplico  que  lo  mas  presto  que  fuere  posi- 
ble se  envíe  el  dinero  para  que  esta  gente  no  padezca ,  pues 
como  prudentísima  que  es ,  vée  mejor  que  yo  lo  que  con- 
viene. 

una  de  las  cosas  que  mas  convienen  es  leña ,  porque  sin 
ella  la  victualla  que  hemos  traído  no  puede  aprovechar  sino 
por  muy  pocos  días,  por  ser  la  mayor  parte  trigo  y  harina. 
Suplico  á  V.  S.  III."^  tenga  por  bien  de  mandar  que  las  ga- 


29  i 

leras  nos  ayuden  á  tracUa,  pues  no  hay  otra  forma  para  po- 
derse haber  y  por  consiguiente  quiera  mandar  que  se  nos 
traiga  alguna  carne  como  lo  hemos  tractado  D.  Juan  de  Vi- 
llaroel,  y  el  Predicare  y  yo,  lo  cual  ssrá  de  mucho  prove- 
cho y  sustentamiento  desta  gente  y  sin  daño  de  S.  M.,  pues 
los  soldados  lo  han  de  pagar  como  lo  demás.  Y  siendo  V.  S. 
III.""  servido  desto  se  podrá  traer  el  bizcocho  que  D.  San- 
cho de  Leiva  traia  por  mas  seguridad  desta  isla,  lo  cual  sien- 
do necesario  haria  el  servicio  que  V.  S.  vée,  y  no  habiendo 
de  comerse ,  no  habria  perdido  mas  del  haber  estado  aquí  co- 
mo en  otra  parte.  Por  lo  cual  torno  á  suplicar  á  V.  S.  111. ™' 
mande  que  se  me  envíe  el  cumplimiento  de  las  victuallas  para 
los  cuatro  meses  que  se  quedó  apunctado  y  que  yo  escribo  á 
S.  M.  que  V.  S.  me  da,  y  sobre  todo  medicinas,  porque  aquí 
no  hay  cosas  de  que  valerse,  ni  para  heridos  ni  otro  género 
de  mal,  según  está  esto  destruido.  Y  porque  V.  S.  111.™"  me 
ha  de  perdonar  estas  importunidades,  considerando  en  do 
me  veo,  le  canso  con  ellas  (1).  Y  porque  con  el  señor  Juan 
Andrea  he  hablado  estos  y  otros  particulares ,  no  me  alar- 
garé mas  que  remitirme  á  su  señoría ,  y  rogar  á  Nuestro  Se- 
ñor guarde  y  acreciente  la  111.™'  persona  y  estado  de  V.  S. 
como  se  desea.  De  iMalta  á  23  de  junio  1566. — Besa  las  ma- 
nos á  V.  S.  111.™'  su  servidor. — El  marqués  de  Pescara. 

Sobre.  —  Al  111.™"  señor  el  señor  D.  García  de  Toledo, 
visorcy  y  capitán  general  por  S.  M.  en  el  reino  de  Sicilia  y 
de  la  mar.  :a 


(1)  Lo  que  sigue  es  de  su  lelra. 


295 

Carla  orUjinal  del  marqués  de  Pescara  á  S.  M.,  fecha  en 
Malla  á  27  de  junio  de  1566. 

Llegada  á  Malta — Desembarco  y  alojamiento  de  las  tropas— Me- 
dios de  defensa. 

[Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  liZOJ 

S.  C.  R.  M. 

Yo  partí  de  Mesina  á  los  16  y  llegué  aquí  á  los  21  ya? 
tan  tarde  que  mandé  no  desembarcar  á  nadie  hasta  que  yoi 
hubiese  hablado  y  tractado  con  el  maestre  ,  así  del  aloja- 
miento que  esta  gente  habia  de  tener,  como  de  los  demás 
particulares  que  se  me  ofrescian.  A  los  22  desembarqué,  y 
según  la  voluntad  y  deseo  del  maestre  ordené  que  los  espa- 
ñoles y  alemanes  se  alojasen  en  ciertas  aldeas  que  están  por 
aquí  cerca,  porque  la  ciudad  vieja  no  padesciese,  que  era  en 
do  podía  alojarse  la  dicha  gente,  la  cual  en  número  de  servi- 
cio, según  entiendo,  no  excede  al  que  escribí  á  V.  M.  de  Me- 
sina (1);  pero  con  lo  que  ella  es,  tengo  esperanza  en  Nuestro 
Señor  que  tendré  tan  buena  mano,  que  viniendo  larmada 
como  aquí  se  presupone  por  las  señales  que  les  paresce  con- 
firmallo,  se  tornará  á  volver  con  mayor  llaga  que  la  pasada. 
Los  indicios  que  aquí  tienen  que  haya  de  venir  son  los  caballos 
que  han  embarcado  en  ella ,  que  para  ninguna  otra  parte  1^^ 
paresce  que  puedan  aprovechar  sino  para  esta  sola ,  pues  lo 
.probaron  por  expiriencia  el  año  pasado.  Confírmalos  esto 


(1)  Lo  de  bastardilla  está  subrayado  en  el  origiaal.  En  el  margen 
de  letra  del  Rey  dice :  ''No  creo  que  lo  he  visto. " 


296 

tanto  mas  el  ver  que  por  estos  mares  no  paresce  un  bajel  de 
cosario,  lo  cual  es  insólito  sino  en  semejantes  ocasiones,  y  á 
la  postre  van  considerando  que  si  bien  larmada  no  hubiese 
salido  con  este  presupuesto  de  Conslantinopla,  que  podría  ser 
que  se  hubiese  mudado  á  la  fama  tan  cierta  que  ha  corrido 
estos  dias  de  que  se  desamparaba  esta  isla ,  por  lo  cual  podria 
ser  que  habiendo  el  bajá  enviado  el  aviso  al  turco  le  hubiese 
esperado,  y  habido  agora  comisión  diferente  de  la  que  sacó 
si  fué  no  tentar  esta  plaza,  porque  se  tiene  aviso  que  después 
de  salida  la  dicha  armada  ,  y  aun  partido  el  turco ,  la  ha  re- 
forzado de  gente  buena  y  escogida ,  y  que  el  tiempo  no  está 
tan  adelante  que  no  pueda  venir  todavía ,  pues  otra  vez  ha- 
biendo saqueado  Agusta  de  paso  vino  para  hacer  la  empresa 
de  aquí  á  los  18  de  julio,  y  la  tentarán  habiendo  empezado 
á  sacar  artillería  en  tierra ,  como  dice  el  maestre ,  si  el  ir  á 
tomar  á  Trípol  no  se  lo  estorbara.  Estos  son  los  argumentos 
que  aquí  se  hacen  sobre  la  venida  de  la  armada,  los  cuales 
para  mí  no  hacen  al  caso,  porque  desde  que  partí  vine  con 
presupuesto  de  que  hubiese  de  venir,  y  así  he  determinado 
proveer  lo  que  estuviere  en  mí  de  la  misma  manera  que  si 
ya  estuviese  en  la  cala  de  San  Pablo  ,  paresciéndome  que  es 
lo  que  conviene ,  por  donde  á  lo  primero  que  he  dado  orden 
ha  sido  en  poner  aquí  toda  la  victualla  al  seguro ,  y  enviar  á 
la  gente  día  por  dia  sus  raciones,  porque  si  sucediese  el  venir 
de  la  armada  se  puedan  unir  y  juntar  sin  embarazo  tanto 
mas  fácilmente.  Mañana  mandaré  poner  toda  la  gente  junta 
en  campana  y  delante  del  mismo  maestre ,  el  cual  gustará 
de  vella  ,  y  le  suplicaré  que  de  los  aventureros  que  aquí  hay 
de  todas  naciones ,  se  tome  tal  expidiente  que  puedan  pelear 
con  orden  y  sin  confusión ,  sabiendo  cada  uno  lo  que  ha  de 
hacer  y  á  quien  obedescer.  Díceme  el  maestre  que  entre  ca- 
balleros de  la   religión,    aventureros  y  soldados  pagados, 


S»7 

habrá  dos  iniil  y  quinientos  ó  tres  mili.  Los  unos  y  los  otros 
son  todos  buenos  soldados  á  mi  parescer ;  y  por  lo  que  yo 
puedo  considerar,  y  por  lo  que  me  paresce  comprender  de  las 
baterías  que  aquí  he  visto  y  entendido  del  modo  que  han  pe- 
leado los  turcos,  tengo  grandísima  esperanza  en  Nuestro 
Señor  y  en  la  buena  fortuna  de  \.  M.  que  nos  ha  de  dar  se- 
ñalada victoria  destos  si  vienen ;  y  según  he  podido  ver  de 
ladispusion  de  la  tierra,  si  D.  García  me  hubiera  podido  dar 
los  pocos  caballos  que  le  pedí,  fueran  de  grandísimo  prove- 
cho para  el  buen  suceso  desta  jornada,  en  la  cual ,  á  mi  jui- 
cio, no  puede  haber  en  sustancia  sino  tres  maneras  para 
defender  esta  plaza.  La  una,  que  es  la  que  menos  paresce 
por  el  daño  que  la  artillería  puede  hacer  estando  la  plaza 
como  está  agora ,  es  defender  San  Telmo ,  y  estas  plazas  del 
Burgo  y  de  San  Miguel,  como  la  otra  vez,  repartiendo  toda 
la  gente  en  ellas,  dándose  mano,  proveyendo  y  socorriendo 
de  una  parle  á  la  otra  con  ella  según  las  necesidades.  El 
otro  modo  que  se  puede  tener  es  el  dallos  la  batalla  en  cam- 
paña con  la  mayor  ventaja  que  se  pudiese  de  sitio  y  ocasión, 
pues  la  bondad  y  calidad  de  la  gente  armada  de  nuestra 
parle  suple  al  número  grande  de  la  délos  enemigos.  El  otro 
expidiente  que  se  podría  tomar  es  poner  en  el  Burgo  y  San 
Miguel  un  golpe  de  dos  mili  y  quinientos  hombres  que  es  su- 
ficiente á  tenerse  muchos  días ,  y  nosotros  con  el  restante 
ponernos  en  la  loma  de  San  Telmo  lo  mas  cerca  que  fuese 
posible  de  la  Marza ,  que  es  el  agua  de  que  ellos  y  nosotros 
habríamos  menester ,  y  de  allí  defendelles  todas  las  plazas; 
ó  costriñillos  á  que  peleasen  con  tanta  desventaja  suya ,  que 
cuando  sucediese,  hallándonos  nosotros  en  nuestros  reparos  y 
sitio  hubiésemos  la  victoria  por  V.  M. ,  y  que  aunque  quisie- 
sen plantar  balería  fuesen  infructuosas  y  de  ningún  provecho, 
y  desta  manera  vendríamos  á  guardar  los  puertos  y  San 


298 

Telmo  teniéndole  á  las  espaldas,  y  á  dar  tanta  mano  y  favor 
al  Burgo  y  San  Miguel ,  que  si  la  armada  no  trujiese  mucha 
mas  gente  de  la  que  se  dice ,  tengo  por  imposible  que  se  pu- 
diese poner  á  emprender  de  lomar  por  batería  y  asaltos  estas 
plazas ,  ó  si  lo  quisiese  hacer  no  se  le  pudiese  estorbar.  Yo  lie 
propuesto  estos  tres  medios  al  maestre  delante  de  todas  las 
personas  principales  que  aquí  sirven  á  V.  M.  y  supUcádole 
que  se  resuelva  luego  en  el  uno,  porque  resolviéndose  presto 
prepararemos  todas  las  cosas  de  manera  á  esta  resolución 
que  cuando  la  armada  venga ,  sabremos  lo  que  hemos  de 
hacer,  y  en  aquel  instante  no  nos  parescerá  nada  nuevo, 
sino  que  como  negocio  sabido  acudiremos  cada  cosa  á  su 
lugar,  lo  cual  es  de  tanta  importancia  como  V.  M.  sabe  mu- 
cho mejor  que  yo.  El  ha  demandado  parescer  á  todos  nos- 
otros ,  el  cual  en  sustancia  es  que  se  busque  sitio  para  de- 
fender la  loma  de  San  Telmo,  como  he  dicho,  y  la  agua  de  la 
Marza,  porque  así  de  las  otras  maneras  que  he  dicho  como 
de  algunas  que  se  podrían  decir,  esta  es  á  mi  juicio  la  menos 
mala.  Llamóla  así  porque  en  todas  hay  muchas  dificultades, 
y  en  esta  menos  que  en  las  demás ,  estante  el  tiempo ,  las 
victuallas  y  todas  las  demás  cosas  en  la  sazón  que  se  hallan 
al  presente.  Por  lo  cual ,  considerando  todo  lo  mejor  que  se 
ha  podido ,  atenderemos  con  la  mayor  industria  y  diligencia 
que  se  podrá  á  este  fin ,  si  ya  los  enemigos  con  su  proceder 
y  número  de  gente ,  ó  alguna  otra  ocasión  no  nos  lo  hiciese 
mejorar,  como  en  la  guerra  suele  suceder  muchas  veces. 
Ayer  fui  á  ver  con  el  maestre  la  fortificación  nueva ,  la  cual 
de  sitio  no  puede  mejorarse,  porque  es  fortisimo  y  guarda  los 
dos  puertos  en  toda  ex.'^  fsicj.  Solo  diferimos  en  que  el  ba- 
luarte que  cae  al  puerto  de  Marza  Muxeto  baja  tanto  á  la 
mar,  que  si  no  es  con  mucha  costa  y  tiempo  no  se  podrá 
descubrir  el  foso  del  través  que  de  arriba  le  ha  de  guardar. 


290 

El  maestre  dice  que  lo  hará  lan  prüfunJo  cuanto  conviene,  y 
que  estando  empezada  esta  traza  no  puede  gastalla ,  liaciéo- 
dose  así  estará  bien  para  en  el  entretanto ,  queriendo  prcH 
seguir  su  desinio  todavía.  También  le  he  dicho  mi  parescer 
con  el  destos  caballeros ,  y  para  que  se  dé  prisa  á  la  dicha 
fortificación,  pues  conviene  tanto  como  la  seguridad  de  la 
isla ,  y  el  quitar  á  V.  M.  de  cuidado ,  y  que  no  se  haya  de 
gastar  tanto  dinero  cada  año  para  conservalla,  procuraré 
que  ayuden  los  mas  alemanes  que  ser  pudiere,  porque  esta 
e5  plaza  que,  como  hayan  hecho  el  foso,  está  en  toda  de- 
fensa. Mañana  tractaré  de  dalles  una  parte  del  á  destajo,  aun- 
que según  me  dice  el  maestre  no  tiene  dineros  ya  sino  dos 
mili  escudos  de  siete  mil  que  le  ha  enviado  D.  García  de  los 
treinta  que  V.  M.  ha  mandado  dalle,  los  cuales  tampoco  rae 
los  quiso  dar  á  mí  cuando  se  lo  acordé  en  Mesina ;  de  ma- 
nera que  esto  hará  gran  dificultad,  mas  yo  no  dejaré  de  ha- 
cer lodo  lo  que  pudiere  para  que  se  haga  esta  fuerza  como  el 
maestre  lo  desea  y  tanto  conviene;  y  si  como  las  galeras  han 
de  estar  en  Mesina  pudiéramos  tener  alguna  cantidad  deltas 
aquí,  se  hiciera  á  tanto  menor  costa  de  V.  M.  y  tanto  mas 
brevemente  que  fuera  ganar  mucho,  y  así  no  dejaré  de  acor- 
dar que  este  invierno  no  será  malo  que  algunas  galeras  vi- 
niesen á  dar  ayuda  no  siendo  necesarias  para  otra  parte  mas 
importante  porque  ahorraría  á  V.  M.  de  costa  y  cuidado, 
siendo  á  mi  juicio  plaza  después  de  acabada ,  defendible  con 
la  gente  y  caballeros  que  el  maestre  podría  hacer,  el  cual  si 
bien  usa  infinita  diligencia  para  conducir  á  buen  fin  la  obra, 
y  por  su  parte  no  se  perdone  ni  á  trabajo  ni  gasto,  ni  sus 
galeras  ni  las  fuerzas  de  la  religión  están  de  manera,  á  mi 
juicio,  que  puedan  acabar  esta  plaza  sin  ayuda  extraordina- 
ria. Y  porque  la  (juc  ha  de  salir  de  V.  M.  es  la  que  hace  al 
caso,  y  la  segura  |M)rquc  se  haga  con  tiempo,  me  ha  pares- 


500 

cido  atreverme  á  decir  mi  parescer  como  criado  y  vasallo 
de  V.  M. ,  pues  la  cosa  mas  consiste  en  la  gente  que  labre 
que  en  los  dineros ,  porque  aquella  falta  aquí ,  y  no  la  ha- 
biendo aun ,  que  haya  lo  otro  no  es  de  provecho. 

Yo  despacho  este  correo  á  V.  M.  para  dalle  aviso  de  lo 
que  pasa  como  me  mandó  en  sus  comisiones,  particularmente 
porque  es  bien  que  entienda  en  el  término  que  esto  queda, 
y  que  de  dineros  yo  no  he  habido  mas  de  16  mil  ducados 
qne  hacen  14  mil  escudos  por  ahí,  los  cuales  son  tanto 
menos  de  los  necesarios  para  el  sustentamiento  desla  gente 
cuanto  allá  es  menos  del  número  que  V.  M.  mandó  que  tru- 
jiese  victuallas.  Yo  no  traigo  mas  de  para  cuatro  meses,  según 
me  dice  el  veedor  general  y  oficiales  della ,  los  cuales  se  re- 
sumen en  dos  ó  mes  y  medio  considerado  la  falta  de  leña  que 
hay  aquí ,  y  el  bizcocho  que  traemos  no  poder  suplir  para 
mas  ultra  de  que  las  demás  vituallas  para  el  debido  tiempo 
no  me  las  ha  aun  enviado  D.  García.  Vino  no  hay  sino  para 
dos  meses  escasos ,  ni  la  isla  podrá  ayudar  de  nada ,  la  cual 
es  de  calidad  y  el  sol  puede  tanto  en  ella  de  dia  y  el  rocío 
en  la  noche ,  que  la  gente  padescerá  mucho  aquí  según  me 
dicen ,  y  porque  en  la  española  que  hay  me  paresce  que 
consiste  el  sustentamiento  y  defensa  de  Italia  se  puede  decir, 
me  ha  parescido  que  como  cosa  en  do  tanto  va  del  servicio 
de  V.  M. ,  conviene  tener  cuidado  que  no  padezca  sin  oca- 
'  sion  ,  sacándola  de  aquí  luego  que  la  armada  haya  mostrado 
lo  que  quiere  hacer ,  pues  por  todo  este  mes  que  viene  á  lo 
mas  largo  se  verá  lo  que  desina,  dejado  que  tampoco  á  mi 
parescer ,  y  por  lo  que  entiendo ,  será  de  mucho  provecho  á 
la  isla  tener  en  ella  alojados  estos  soldados.  Con  esta  envío 
traslado  de  lo  que  escribo  á  D.  García  de  Toledo ,  pidiéndole 
algunas  cosas  que  aípií  son  necesarias  mucho.  Guarde 
Nuestro  Señor  la  real  persona  de  V.  M.  por  tan  largos  años 


301 

V  el  acrescentamicnto  de  mas  reinos  y  señoiios  que  sus  cria- 
dos y  vasallos  deseamos.  De  Malta  á  27  de  junio  de  15GG. — 
De  V.  R.  M.  menor  criado  y  vasallo  que  sus  pies  y  manos 
besa. — El  marqués  de  Pescara. 

Sobre  de  la  caria.  — .\  la  S.  G,  R.  M.  el  Rey  nuestro 
señor. 


Copia  de  caria  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  3/., 
fecha  en  Mesina  á  28  de  junio  de  156G. 

Le  dice  que  ha  enviado  á  Malta  ocho  mil  hombres  al  mando  del 
marqués  de  Pescara  con  todas  las  provisiones  necesarias  —  Compra 
de  galeras. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  4130.y 

S.  C.  R.  M. 

En  Ñapóles  á  último  del  pasado  recibí  la  carta  de  V.  M. 
de  9  del  mismo,  y  dice  V.  M.  en  ella  que  le  paresce  bien  la 
determinación  que  yo  tenia,  según  entendió  por  mis  cartas 
de  26  de  marzo ,  de  que  partiese  para  Malta  á  ver  la  forma 
que  podria  tenerse  en  la  fortificación  del  monte  de  San  Tel- 
mo  y  alojamiento  de  la  gente  que  allí  habia  de  ir ,  por  repre- 
sentárseme tantas  dificultades,  pero  quede  cualquier  manera 
era  bien  poner  en  Malta  toda  la  infantería  española  y  alema- 
na que  se  me  habia  escrito,  y  ansí  partí  luego  de  Ñapóles  y 
de  juncto  á  Capri  á  4  del  presente  escrebí  á  V.  M.  que  pues 
no  obstante  lo  escrito  por  mí ,  y  tener  noticia  cierta  que  se 
habia  rescibido  la  carta  que  escrebí  á  V.  M.  desde  Trápana 
cuando  volví  de  Malta,  en  que  decia  aunque  brevemente  no 


r,02 

convenir  que  se  pusiese  allí  el  dicho  número  de  genle  ,  me 
mandaba  que  se  metiese ,  que  luego  en  llegando  aquí  escri- 
biría al  maestre  ofresciéndosela ,  y  ansí  fué  Juan  Andrea  á 
Malla  á  ello ,  y  el  maestre  respondió  como  V.  M.  verá  por 
sus  cartas  que  la  tomarla,  y  con  la  mas  brevedad  que  se 
pudo  le  envié  debajo  del  marqués  de  Pescara,  al  cual  dio 
V.  M.  el  cargo  della ,  cinco  mil  españoles  y  tres  mil  tudescos 
con  todas  las  vituallas  y  municiones  necesarias  para  todo  oc- 
tubre, y  con  ello  partió  Juan  Andrea  á  los  16  del  presente, 
y  de  hora  en  hora  le  espero ,  que  con  esta  gente  y  la  que 
Juan  Andrea  me  refirió  que  tiene  el  marqués ,  serán  doce 
mil  hombres,  y  mejores  que  los  que  primero  estaban  desig- 
nados, y  ansí  lo  de  Malta  está  con  el  número  de  gente  y  vi- 
tuallas que  V.  M.  ha  mandado,  y  aunque  el  meter  desta  gen- 
te y  victuallas  hubiera  parescido  conveniente  desde  el  prin- 
cipio, no  se  pudiera  haber  hecho  un  dia  antes,  por  causa  de 
los  malos  tiempos  que  hizo  para  poder  traerla  de  las  par- 
les donde  estaba.  Yo  sé  que  ansí  en  esto  como  en  lo  de  la 
Goleta  he  hecho  lo  que  debia  al  servicio  de  V.  M.,  y  porque 
me  escriben  personas  graves  y  de  auctoridad  que  allá  se  en- 
tiende lo  contrario,  suplico  á  V.  M.  dos  cosas;  la  una  que 
se  acuerde  que  por  una  carta  de  2  de  hebrero  tenia  yo  bien 
vista  esta  manera  de  ofenderme ,  y  la  otra  es  suplicar  hu- 
milmenle  á  V.  M.  que  como  pase  este  invierno  y  la  prima- 
vera del  verano  que  viene ,  que  parte  del  un  tiempo  y  del 
otro  soy  forzado  á  emplearlo  en  curarme ,  sintiéndome  liarlo 
malo  por  no  haber  hecho  esto  en  este  marzo  y  abril  pasado, 
me  haga  V.  M.  merced  de  darme  desde  agora  licencia  que 
yo  vaya  á  dar  cuenta  á  V.  M.  deslo,  y  de  las  cosas  que  es- 
tán á  mi  cargo,  y  no  solo  aprovechará  para  lo  pasado,  pero 
para  lo  presente  y  por  venir ;  ni  es  posible  que  yo  acierte  á 
servir  á  V.  M.  ni  lo  pueda  hacer  con  contcnlamienfo  de  otra 


503 

manera,  y  proponiéndolas  á  V.  iM.  en  presencia,  se  podrá 
dar  forma  en  otras  cosas  muy  principales  que  tocan  á  su  ar- 
mada y  al  gobierno  deste  reino. 

El  inconveniente  que  en  esto  ha  habido  es  no  haberse 
servido  V,  M.  de  la  gente  del  papa ;  pero  por  contrario  la 
que  queda  en  Malta  es  de  mucha  mas  bondad,  y  no  quedan- 
do tiempo  para  traerla,  escrebí  al  comendador  mayor  el  ca- 
pítulo que  V.  M.  verá. 

Estando  las  cosas  en  el  término  que  están  y  la  armada 
del  turco  menor  en  número  de  lo  que  por  lo  pasado  se  decia, 
tuviera  por  mucho  mejor  tener  en  la  de  V.  M.  toda  la  gente 
de  Malta  y  de  la  Goleta ,  porque  con  esto  estuviéramos  como 
convenia  para  la  defensa  y  para  la  ofensa,  porque  está  claro 
que  viéndome  con  la  de  V.  M.  que  son  noventa  galeras  muy 
proveido  de  infantería,  que  no  habian  ellos  teniéndome  á  Ins 
espaldas  de  osar  poner  gente  en  tierra  para  ningún  efecto, 
tanto  mas  estando  en  parte  donde  cada  dia  podia  crescer  de 
mayor  número  de  gente  y  cuantidad  de  galeras,  pues  sin  las 
noventa  voy  poniendo  en  orden  las  que  mas  se  pueden  para 
loque  se  pudiese  ofrescer,  en  lo  cual  tengo  poca  ó  ninguna 
esperanza  viéndome  desarmado,  y  para  la  ofensa  tal  ocasión 
se  podría  ofrescer  que  me  inquietase  toda  la  vida  que  rae 
queda  el  no  poderla  tomar.  Pero  al  fin  lo  que  está  proveí- 
do ,  pues  Dios  ha  sido  servido  dello ,  es  de  creer  que  es  lo 
mejor  y  todavía  podría  ser  que  el  armada  temiese  de  pasar 
en  estas  partes ,  y  para  tener  verdadera  noticia  de  dicha  ar- 
mada para  guiar  conforme  á  ella  muchas  cosas  tocantes  al 
servicio  de  V.  M.,  envié  á  D.  Juan  Zanogera  con  dos  galeras 
bien  armadas  con  orden  que  la  viese  y  contase.  Partió  de 
aquí  á  los  19  del  presente,  y  llegó  hoy  á  dos  horas  de  dia, 
y  hace  la  relación  que  V.  M.  verá ,  la  cual  va  con  esta. 
He  luego  avisado  á  Malta  con  una  galera  bien  en  orden, 


y  escrito  al  maestre  y  al  marqués  lo  que  D.  Juan  trae,  y 
dado  orden  á  Juan  Andrea  que  salga  luego  de  aquel  puerto 
para  que  el  armada  no  le  encerrase  allí ,  por  haberle  man- 
dado cuando  de  aquí  partió  que  se  detuviese  allí  cinco  ó  seis 
dias,  ó  hacer  henchir  de  agua  las  cisternas  que  hubiese,  si  al 
marqués  le  paresciese  convenir  ansí. 

También  he  despachado  á  la  Goleta  con  el  mismo  aviso 
y  á  Cerdeña  para  que  estén  sobre  sí,  y  en  el  término  que 
quedaba  la  fortificación  de  la  dicha  Goleta  cuando  D.  San- 
cho partió  de  allí  á  los  dos  de  junio,  y  el  designo  della  verá 
V.  M.  por  lo  que  con  esta  se  le  envía.  Estánse  despalmando 
esta  noche  ocho  galeras  para  enviar  á  la  Goleta  el  cumpli- 
miento de  la  infantería  del  reino  de  Ñapóles ,  porque  aunque 
me  han  dicho  D.  Sancho  y  Gabrio  Cervellon  que  creen  que 
D.  Alonso  no  querrá  mas  gente,  y  quiriéndolo  saber  yo  del 
mismo,  le  he  escrito  que  me  lo  haga  saber,  y  viendo  que 
esta  respuesta  no  podrá  venir  á  tiempo,  he  determinado  de 
enviar  la  dicha  gente  en  estas  ocho  galeras,  y  si  la  quisiere 
la  tomará,  y  sino  se  podrá  volver  en  ellas,  y  también  le  en- 
viaré los  seis  cañones  que  el  prior  D.  Hernando  trujo,  por- 
que D.  Alonso  los  pide  con  gran  furia.  Llevarán  hasta  treinta 
mil  escudos  de  los  que  acá  yo  tengo ,  para  que  pueda  socor- 
rer la  gente  ordinaria  de  la  Goleta. 

La  carta  de  V.  M.  de  4  del  presente  rescebí  en  24  del 
mismo,  y  parésceme  que  ha  hecho  V.  M.  muy  prudente  de- 
terminación en  suspender  por  este  año  la  empresa  que  por 
allá  se  Iractaba ,  y  dar  acá  y  allá  las  órdenes  sobre  ello ,  que 
V.  M.  ha  mandado  escrebir  y  proveer,  y  como  cesen  acá 
las  ocasiones  haré  yo  otro  tanto  de  los  tudescos ,  y  si  en  esta 
no  respondiere  á  otros  cabos  que  tienen  las  últimas  cartas  de 
Y.  M.  será  por  no  detener  este  correo ,  porque  me  paresce 
importar  que  sepa  V.  M.  coa  brevedad  las  nuevas  que  hay 


505 

de  la  armada.  Y  la  provisión  de  dinero  que  V.  iM.  últimamen- 
te ha  hecho,  ha  sido  muy  conveniente,  pues  con  estas  nue- 
vas de  la  venida  de  la  armada  paresce  que  lo  de  acá  se  Va 
alargando ,  y  no  se  dispondrá  del  sino  en  las  cosas  necesa- 
rias y  forzosas. 

Escríbeme  V.  M.  que  ha  mandado  comprar  las  galeras 
de  Mari,  y  por  otra  carta  me  ha  mandado  á  mí  que  compre 
también  las  de  Gabrio  Gervellon.  Y  pero  manda  V.  M.  una 
cosa  que  no  conviene  á  su  servicio,  y  es  que  yo  sustente  en 
mi  cargo  las  de  Gabrio,  y  que  las  de  Mari  se  desarmen, 
siendo  las  de  Gabrio  muy  ruines,  y  las  de  Mari  las  mejores 
que  hay  en  la  mar,  conviene  que  se  haga  lo  contrario ,  y 
ansí  siendo  Y.  M.  servido  dello,  yo  sustentaré  las  dos  de 
Mari  en  bajo  de  mi  cargo,  como  Y.  M.  lo  ordena,  y  las  de 
Gabrio  se  podrán  desarmar  y  repartir  entre  estas  galeras  de 
V.  M.  y  poner  los  buques  y  adrezos  en  esta  atarazana  con- 
servados, como  conviene  para  cualquier  necesidad.  Y  en  es- 
tas galeras  que  yo  tengo  á  cargo  es  bien  menester  esta  chus- 
ma, porque  como  ha  tanto  que  no  les  han  traído  forzados 
de  Castilla,  ni  se  remedian  de  los  de  Ñapóles  porque  se  dan 
todos  á  D.  Sancho,  y  habiéndose  librado  y  librando  cada  dia 
los  que  cumplen  el  tiempo ,  hay  gran  necesidad  dellos.  Y 
Nuestro  Señor  guarde  la  vida  de  V.  M.  por  largos  años  como 
la  cristiandad  ha  menester.  De  Mesina  á  28  de  junio  1566. 
— Criado  y  vasallo  de  Y.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos 
besa. — Don  García  de  Toledo. 

Sobre  de  la  carta.  —  A  la  S.  C.  R.  M.  el  Rey  nuestro 
señor. 


Tomo  XXX.  20 


306 


Copia  de  tin  capitulo  de  caria  de 

Dentro  de  esta  se  ]  O.  García  de  Toledo  al  cotnendador 
halla  el  capitulo  de  <  ,     ^^      .,,      ,     ,n     ,     -     > 

carta  siguiente :  |  tn^yor  de  Casltlla  de  iQ   de  jumo 

de  1566. 


Para  enviar  á  S.  M.  por  via  del  secretario  Eraso. 

Parecíame  ya  tarde  y  fuera  de  tiempo  el  pedir  á  Su  San- 
tidad los  tres  mil  hombres  para  lo  de  Malla ,  y  ansí  he  que- 
rido añadir  dos  mil  españoles  mas  de  los  seis  mil  infantes 
que  S.  M.  mandaba  poner  allí,  y  aunque  me  harán  falta  no 
será  de  manera  que  no  piense  guardar  lodo  lo  que  en  este 
reino  hay  de  imporlancia,  pues  me  quedará  en  estos  puertos 
toda  el  armada  de  mar.  Si  á  V.  S.  I.  le  paresciere  valerse 
desla  ocasión,  diciendo  á  Su  Santidad  que  estos  dos  mil 
hombres  me  los  ha  mandado  S.  M.  poner  por  aligerarle  á 
él  de  trabajo  y  gasto,  o  porque  se  pueda  valer  de  su  gente 
para  las  amenazas  que  dicen  que  hace  el  armada  á  Anco- 
na,  podrálo  hacer  ó  dejarlo  según  le  paresciere  mas  conve- 
niente. 

Relación  citada. — La  relación  que  trujo  D.  Juan  Zano- 
guera  del  armada  turquesa. 

Relación  del  viaje  que  yo  D.  Juan  Zanoguera  he  ido  á  ha- 
cer á  levante  con  dos  galeras  por  orden  del  Ilustrisimo 
y  Excmo.  Sr.  D.  García  de  Toledo  mi  señor,  para  to- 
mar lengua  de  la  armada  turquesa,  y  relia,  y  con  talla 
y  hacelle  cierta  relación  della. 

Parli  de  Mesina  miércoles  á  los  19  de  junio  dos  horas 
después  de  media  noche.  Llegué  jueves  á  las  22  horas  antes 


307 

de  mediodía  al  cabo  de  Spartivenlo ,  que  son  sesenta  millas, 
hice  allí  la  aguada  y  partí  á  mediodía.  El  viento  era  medio- 
día lebeche.  Gobernamos  por  la  cuarta  de  levante  al  griego 
á  ocho  millas  por  hora:  saltó  el  viento  al  maestralgo;  verna- 
mosel  mismo  camino  á  diez  millas  por  hora.  Viernes  á  las  22 
horas  después  de  mediodía  descobrimos  á  Chafalonía,  y  á 
media  noche  tomé  tierra ,  que  son  trecientas  millas  del  cabo 
deSpartivento,  yen\iéunabarquetaen  tierra  á  tomar  lengua. 
Yo  me  volví  á  la  mar  treinta  millas ,  y  desarbolé  y  estuve 
sábado  á  los  23  todo  el  dia  desarbolado ,  y  á  la  noche  vol- 
víme  en  tierra.  Hízome  el  tiempo  muy  borrascoso ,  y  mucha 
mar  y  agua,  y  relámpagos  y  truenos,  que  no  pude  ver  la 
señal  de  la  barqueta  hasta  una  hora  antes  del  dia,  y  la  cobré 
y  me  envió  á  decir  el  gobernador  de  la  Chafalonía  que  no 
rae  podia  responder  á  una  carta  que  yo  le  escrebi ,  y  no  sabia 
mas  que  la  armada  estaba  en  Xío ,  y  creia  que  se  habia  vuelto 
al  archipiélago.  Yo  visto  que  ya  era  de  dia  y  que  no  era 
bien  descubrirme  del  Xanto,  no  quise  partir  de  allí  hasta  la 
noche  domingo  25 ,  y  fui  por  fuera  del  Xanto  el  viento  al 
maestral  muy  fresco  y  llegué  sobre  Standía ,  que  son  cerca 
de  ochenta  millas,  dia  de  San  Juan,  una  hora  antes  del  dia, 
á  seis  millas  fuera  de  la  isla ,  y  amainé  las  velas  y  envié 
una  barqueta  á  tomar  lengua  de  unos  flaires  que  allí  están, 
y  hice  el  caro  al  árbol  y  puse  un  hombre  en  la  peña,  y  en 
siendo  dia  dijo  que  veia  dos  velas.  De  allí  á  un  rato  dijo  que 
veia  toda  larmada  á  la  vela  que  iba  la  vuelta  de  lebeche  y 
que  seria  doce  millas  de  allí ,  y  contó  de  ochenta  velas  arriba 
y  no  podia  contar  mas.  Yo  entonces  melíme  en  tierra  en  la 
isla,  y  los  flaires  tenían  guardia  en  una  torre,  y  me  dijeron 
que  no  habían  visto  mas  de  cuatro  navios  y  otros  dos  mas 
lejos.  Yo  sobíme  en  la  torre  y  descobri  dos  velas  que  me 
parescian  galeras  que  iban  la  vuelta  de  lebeche.  No  me  fié 


508 

de  nadie,  aunque  me  decían  que  habian  visto  la  armada, 
sino  que  yo  la  quise  ver  y  contar,  que  asi  me  lo  había  man- 
dado D.  García  mi  señor,  y  á  las  diez  horas  Despaña  las  dos 
galeras  amainaron  y  no  las  vimos  mas.  Yo  visto  esto ,  y  que 
me  certificaban  ser  la  armada ,  y  que  iba  por  lebeche  porque 
el  viento  era  maestral,  forzoso  determiné  estar  allí  hasta  la 
noche  y  por  el  mismo  viento  hacer  fuerza  hasta  topar  con  la 
armada  si  era  ella  ó  con  las  dos  galeras ,  y  vello  con  mis  ojos, 
y  no  traer  relación  sino  de  vista.  Y  á  mediodía  vimos  hacer 
vela  á  las  dos  galeras  y  venir  la  vuelta  de  Lestanfería  fsicj. 
Yo  visto  que  no  parescian  mas  de  dos ,  determiné  de  spera- 
llas,y  dos  por  dos  no  podia  hallar  mejor  lengua,  pues  yo  ve- 
nia muy  bien  armado ,  y  cuando  estas  galeras  fueron  á  cua- 
tro millas  de  la  isla  y  yo  estaba  cubierto  con  la  isla ,  y  me 
persuadían  los  marineros  que  habian  visto  la  armada  y  que 
parescian  mas  velas ,  yo  no  las  veía ,  y  les  dije  que  yo  no  era 
venido  para  dar  relación  por  vista  de  otros ,  y  con  el  mucho 
sol  no  se  veían ;  mas  ya  una  hora  después  de  mediodía  unos 
marineros  que  yo  tenia  puestos  en  otra  torre ,  con  una  ban- 
dera hizo  señas  de  la  armada,  y  entonces  yo  la  vi  que  venia 
la  vuelta  de  la  isla  á  la  vela  á  seis  millas,  y  empecé  á  contar 
y  no  pude  á  causa  del  sol ,  y  juzgué  serian  cient  galeras 
sin  haber  cuatro  ó  seis  mas  ó  menos.  Entonces  fué  menester 
salirme  por  donde  me  viesen ,  porque  no  podia  hacer  otra 
cosa  porque  muchas  galeras  me  estaban  sobreviento ,  y  salí 
de  la  isla  al  remo  á  la  vuelta  del  Xanto,  y  en  saliendo  me 
descubrieron  parte  de  la  armada ,  y  las  galeras  primeras  ti- 
raron una  pieza ,  que  es  señal  de  ponerse  en  caza ,  y  vinie- 
ron la  vuelta  mía,  y  luego  otra  galera  gruesa  tiró  otra  pieza. 
Venia  de  las  postreras  de  aquella  banda  de  galeras  y  empezó 
de  adelantarse  de  las  otras  á  la  vela.  Yo  visto  que  al  remo 
proejando  me  ganaban  camino  á  causa  de  estar  sobreviento, 


509 

determiné  de  hacer  vela  y  empéceme  á  alejar  de  hasta  quince 
galeras  que  venían  delante  el  armada ,  y  la  que  tiró  el  se- 
gundo tiro  dejó  las  otras  galeras  y  adelantóse  muy  mucho, 
y  junto  á  ella  á  dos  millas  venían  tres  galeras ,  y  adelantóse 
mucho  ,  y  á  cinco  millas  otras  cuatro  galeras  y  esta  gruesa, 
que  juzgamos  según  estuvo  cerca  ser  del  bajá,  y  como  á  la 
vela  también  me  entraba  á  las  cuatro  horas  de  la  tarde,  de- 
terminé de  amainar  y  ponerme  á  proejar  que  el  viento  era 
muy  fresco  al  maestral.  Hice  cuenta  de  pasar  entre  Chafa- 
lonía y  el  Xanto,  y  vi  que  me  entraban  tanto  y  se  alargaba 
de  las  otras  y  determiné  si  la  noche  venia  y  estuviese  de  suerte 
que  yo  pudiese  erabestilla  sin  que  sus  galeras  le  diesen  socor- 
ro y  no  quise  echar  á  la  mar  dos  barquetas  que  llevaba  por 
ser  de  dia ,  y  no  pensasen  que  andaba  poco  y  haberse  ido  dos 
millas  adelante  la  galera  que  conmigo  venia,  y  ansí  á  dos 
horas  de  noche  yo  vi  la  galera  que  siempre  me  cazaba.  A 
dos  millas  eché  las  dos  barquetas  á  la  mar,  y  en  echándolas 
alargúeme  y  siempre  á  solaviento  y  por  mi  popa  vi  hacer  fó- 
siles ;  yo  determinaba  si  no  fuera  por  los  fósiles  que  vi,  volver 
á  hacer  vela  y  amollar  la  vuelta  del  canal  de  la  Chafalonía 
la  chica,  y  llegué  á  dos  horas  antes  del  dia  al  cabo  Desquinar 
que  es  el  postrer  cabo  del  Xanto  cerca  de  noventa  millas, 
de  donde  me  empezaron  de  dar  la  caza,  y  alcancé  allí  la  otra 
galera ,  y  hicimos  vela  y  atravesamos  la  Chafalonía  que  son 
doce  millas  de  canal  antes  que  se  hiciese  de  dia ,  y  esto 
martes  á  veinte  y  cinco.  Yo  refresqué  la  chusma  á  las  islas 
de  los  Guardianes,  hice  vela  la  vuelta  de  la  mar  por  lebeche, 
que  el  viento  no  me  dejó  hacer  otro  camino ,  y  á  la  tarde  al 
poner  del  sol  estaba  sesenta  millas  del  Xanto.  Amainé  y  puse 
el  caro  al  árbol  y  un  hombre  á  dcscobrir  á  la  pena ,  y  por 
jaloque  á  25  millas  de  mí  fuera  del  Xanto  volvió  á  parescer 
la  armada  á  la  vela:  esto  martes  á  25  del  dicho.  Yo  visto 


310 

esto,  hice  cuanta  fuerza  pude  para  dar  aviso  al  Sr.  D.  Gar- 
cía ,  y  llegué  aquí  á  Mesina  hoy  viernes  á  28  en  amanes- 
ciendo. 


Copia  de  carta  de  D.  García  de  Toledo  al  gran  maestre  de 
San  Juan.  Mesina  28  de  junio  de  1566. 

Noticias  de  la  armada  del  Turco. 

(Archivo  del  Exc/no.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.J 

Il.«°  yR."'>  Señor: 

Hoy  viernes  á  las  diez  de  la  mañana,  contando  á  la  cuenta 
de  Italia,  ha  llegado  D.  Juan  Zanoguera,  que  le  envié  con 
dos  galeras  en  levante  con  orden  que  descubriese  el  armada 
y  viese  con  sus  ojos  el  número  della.  Encontróla  la  mañana 
de  San  Juan  á  una  hora  de  dia  sobre  la  Stronfadia  que  iba 
por  lebeche  á  la  vela  y  los  vientos  eran  maestrales  muy  fres- 
cos. Tuvieron  con  él  once  horas  de  fuego  de  cañonería,  ha- 
biéndole comenzado  á  dar  la  caza  á  cinco  millas  lejos ,  y  se 
la  dieron  por  espacio  90  millas.  Tornóla  á  encontrar  el  mar- 
tes pasado  en  la  tarde  á  los  25 ,  estando  él  60  millas  del 
Zante  por  maestral,  tirando  todavía  el  armada  por  lebeche  40 
millas  lejos  del  Zante.  El  número  de  la  armada  es  de  ciento 
y  seis  galeras  y  siete  galeotas.  Es  bien  verdad  que  dice  un 
hombre  que  trae  que  se  huyó  de  la  armada ,  que  hablan  en- 
viado ocho  á  Constanlinopla  con  gente  que  tomaron  en  Xío; 
pero  siendo  el  armada  de  poco  número ,  creo  cierto  que  la 
recogerá  en  la  Prediza.  También  creo,  aunque  me  podria  en- 
gañar en  ello ,  que  el  armada  no  viene  ni  sobre  Malla  ni  la 


311 

Goleta ,  y  tuviera  por  mas  seguro  lo  uno  y  lo  olro  y  aun  todo 
lo  demás  si  tuviera  en  el  armada  de  S.  M.  la  gente  que  está 
en  estas  dos  plazas ;  pero  esto  debe  ser  lo  mejor,  pues  Dios  lo 
ha  encaminado  ansi.  Traen  cuarenta  barriles  de  pólvora  por 
galera  y  balas  para  ella ,  y  todavía  los  dos  caballos  por  ga- 
lera. Parésceme  que  V.  S.  I.  debe  enviar  aquí  sus  galeras, 
si  no  le  paresciere  mas  convenir  otra  cosa.  A  D.  Alvaro  es* 
pero  de  punto  en  punto  y  á  las  galeras  de  Saboya ,  que  los 
unos  y  los  otros  eran  ya  partidos  de  Genova.  Seremos  no- 
venta galeras  con  las  dos  de  V.  S.  I. ,  veniendo  las  de  la  re- 
ligión, y  podránse  armar  aquí  dentro  de  breve  tiempo  otras 
doce  ó  quince.  Esto  es  lo  que  hay :  de  lo  que  mas  hubiere, 
daré  aviso  á  V.  S.  I.  En  Mesina  á  xxvin  de  junio  de  1566. 
Al  respaldo  se  lee:  Al  gran  maestre  de  Sant  Juan  ea 
xxviii  de  junio  1566. 


Carta  original  de  D.  Garda  de  Toledo  al  señor  Francis- 
co de  Eraso.  De  Mesina  á  28  de  junio  1566. 

Le  aconseja  que  no  deje  el  servicio  de  S.  M. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  iiZO.) 

Lustre  Señor  : 

He  rescibido  la  carta  de  v.  m.  de  4  del  presente  en  24 
del  mismo,  y  holgado  de  entender  que  tuviese  salud.  Yo 
traigo  poca  por  no  haber  querido  ni  podido  curarme  destos 
temblores;  procuraré  de  hacerlo  este  agosto.  Beso  á  v.  m. 


512 

las  manos  por  la  memoria  que  tuvo  de  comunicar  á  S.  M.  lo 
que  le  escrebí  acerca  del  gasto  que  se  ha  hecho  y  hace  con 
sus  galeras. 

Pues  V.  m.  dice  que  Francisco  de  Eraso  tiene  necesidad 
de  ir  allá,  y  que  para  ello  le  dé  licencia,  se  hará  ansí ,  y  po' 
dríalo  hacer  mas  coinodamcntc  si  fueren  galeras  en  Espa- 
ña. El  cargo  de  veedor  de  los  castillos  deste  reino  se  entre- 
tiene  como  v.  m.  me  escrebió  que  lo  deseaba. 

A  S.  M,  escribo  lo  que  v.  m.  verá :  á  ello  me  remito.  Y 
diré  que  en  el  particular  de  v.  m.  holgaría  yo  de  tener  me- 
nos pasión  para  poderle  dar  mi  parecer.  Pero  al  fin  el  amor 
y  la  razón  me  harán  refrenar  lo  mas  que  yo  pudiere  en  este 
particular,  y  ansí  digo  que  soy  de  opinión  que  no  es  bien  á 
ninguno  que  nazca  vasallo  pudiéndose  excusar,  aunque  haya 
causas  para  ello,  partirse  desdeñado  de  su  príncipe ,  porque 
aunque  le  parece  á  hombre  que  tiene  con  que  vivir,  y  que 
puede  hacerlo  sin  tener  datas  ni  presas  con  ellos,  todavía  tie- 
nen las  manos  tan  largas  que  pueden  alcanzar  á  todas  partes 
por  retirado  y  apartado  que  hombre  esté ,  y  aunque  se  me 
podría  decir  que  no  quiere  v.  m.  dejarle  desdeñado,  por  acla- 
rarme digo  que  tampoco  ha  de  ser  desabrido  n¡  resentido ,  y 
aunque  los  hombres  se  suelen  conhortar  de  los  agravios  con 
mostrar  á  las  gentes  que  no  son  hombres  para  sufrillos ,  esto 
es  quererse  llegar  mas  á  la  voluntad  que  á  la  razón  ni  á  lo 
que  cumple,  y  ansí  querría  que  v.  m.  rehuyese  deste  ca- 
mino, y  puédelo  hacer  quizás  mejor  que  otro  ninguno,  pues 
es  tenido  en  opinión  de  todos  por  hombre  de  valor,  y  no  es 
menester  para  confirmar  á  las  gentes  en  esta  opinión  la  ida 
de  su  casa.  Paréoeme  que  en  esta  ocasión  conviene  mas  ha- 
cer profesión  de  hombre  sufrido  y  considerado  de  lo  por  ve- 
nir que  riguroso  de  h  pasado.  Lo  que  yo  haría,  señor,  es 


no  hacer  ninguna  demostración  de  quererse  v.  m.  partir,  ni 
dar  seguridad  de  querer  estar ,  y  suspender  esta  ida  por  un 
año,  en  el  cual  procuraría  de  tomar  todas  las  cautelas  que 
fuesen  necesarias  para  asegurarse  de  las  cosas  de  hacienda 
que  han  pasado  por  su  mano ,  para  que  en  ningún  tiempo 
pudiesen  inquietar  á  v.  m.  ni  á  sus  hijos,  y  en  este  medio 
yo  iria  muy  á  la  voluntad  del  rey,  y  si  en  este  tiempo  las  co- 
sas se  remediasen  ó  se  pusiesen  por  otro  camino  á  satisfacion 
de  V.  m.  el  cuedar  ahí  estaría  en  su  mano,  venando  camina- 
sen sin  otra  suficiente  mejoría  podríase  entonces  v.  m.  reti- 
rar sin  quejarse  de  sí  mismo  por  haberlo  precipitado ,  y,  se- 
ñor ,  creo  que  no  es  posible  que  el  rey  se  pueda  hallar  en 
la  manera  del  negociar  ni  en  el  cuidado  que  de  su  hacienda 
se  tenia ,  ni  inteligencia  della  por  otras  manos  que  por  las 
de  V.  m.,  y  tanto  mas  si  quajase  la  ida  de  Flándes,  á  donde 
creo  cierto  que  en  ninguna  manera  sabría  el  rey  vivir  sin 
V.  m.,  y  siendo  esto  ansí,  como  creo  que  será,  no  querría 
que  se  hallase  v.  m.  por  este  tiempo  que  digo  lejos  destas 
ocasiones,  porque  juzgo  que  la  condición  del  rey  sea  mas 
aparejada  para  tornarse  á  servir  del  que  tiene  presente  que 
no  para  enviarle  á  sacar  de  su  casa  si  una  vez  se  retira,  y 
como  digo  quando  viéremos  que  esto  tiene  poco  fundamento 
en  la  mano  está  el  dejarlo  lodo.  Crea  v.  m.  que  soy  yo  uno 
de  los  amigos  que  tiene  que  mas  miro  por  su  reputación  y 
honra ,  y  que  mas  sintiria  ver  en  la  corte  ni  en  otra  parte 
á  V.  m.  sin  ella ;  pero  al  fin  son  cosas  que  se  han  de  verter 
poco  á  poco  y  no  de  un  golpe  por  las  causas  dichas  y  por 
«Iras  muchas  que  podría  decir.  Quisiérame  hallar  presente 
para  hablar  en  este  negocio  con  mas  luz ,  y  hallándome  au- 
sente no  sé  otra  cosa  que  decir  sino  suplicar  á  v.  m.  que  no 
habiendo  otra  cosa  sustancial  que  lo  derribe  que  no  se  apar- 
te de  este  consejo,  e!  cual  se  da  lleno  de  toda  voluntad  y 


314 

arr.or,  y  vacío  de  toda  propiedad  y  interese.  En  Mesina  á  28 
de  junio  4566.  . ;, 

Servidor  de  v.  m. — Don  García  de  Toledo. 

Al  secretario  Eraso. 

Sobre  de  la  caria, — Al  Ule.  señor  el  señor  Francisco  de 
Eraso  del  Consejo  de  S.  M.  y  su  secretario 


Copia  de  carta  de  D.  García  de  Toledo  al  marqués  de  Pes- 
cara. 2  de  julio  de  1566. 

Si  conviene  la  estada  de  los  tudescos  en  Malta. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

ÍLLMO.  Señor: 

Al  gran  maestre  escribo  lo  que  V.  S.  verá  por  su  carta. 
V.  S.  me  hará  merced  de  juntarse  con  él  para  que  se  re- 
suelva en  ello ,  porque  pueda  yo  conforme  á  ello  tomar  acá 
lo  que  mas  parescerá  convenir,  y  en  caso  que  pareciese  con- 
veniente la  estada  de  los  tudescos  porque  ayuden  á  la  fá- 
brica, es  bien  que  considere  V.  S.  el  gasto  que  hacen  á  S.  M. 
Y  pues  V.  S.  vée  cuanto  importa  este  negocio  al  servicio  de 
S.  M. ,  le  suplico  que  procure  que  el  gran  maestre  me  res- 
ponda con  brevedad.  Y  Nuestro  Señor ,  etc. 


8» 


Carla  original  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M.,  fecha  en 
Mesina  á  2  de  julio  de  1566. 


Que  no  conviene  prestar  galeras  al  gran  maestre  para  que  ayu^ 
den  á  la  fábrica  de  la  nueva  ciudad  de  Malta.  //{ 

-ofi 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  1130.^ 


S.  C.  R.  M. 

Teniendo  la  opinión  que  he  escrito  á  V.  M.  de  que  la  ar- 
mada del  turco  no  pasará  acá  este  año,  ni  que  menos  pre- 
tenderá ponerse  sobre  plaza  de  importancia,  teniendo  recelo 
á  la  de  V.  M.,  me  ha  parescido  por  aliviar  de  costa  escrebir 
al  maestre  y  al  marqués  de  Pescara  lo  que  V.  M.  verá  por 
las  copias  que  van  con  esta ,  porque  entretanto  que  me  avi- 
sa de  su  parescer  se  podrán  tener  otras  nuevas  del  progreso 
del  armada,  y  conforme  á  ellas  tomar  resolución  en  lo  que 
mas  parescerá  convenir  al  servicio  de  V.  M. 

He  entendido  que  el  maestre  escribe  á  V.  M.  suplicán- 
dole que  le  mande  emprestar  algunas  galeras  para  que  ayu- 
den á  la  fábrica  de  la  nueva  ciudad ,  y  si  es  ansí  no  he  que- 
rido dejar  de  acordar  á  V.  M.  que  si  las  concede  será  la  total 
destrucción  dellas  y  el  verdadero  camino  para  no  tener  ga- 
leras, porque  quedando  la  chusma  tan  cansada  del  verano 
pasado ,  y  habiendo  menester  el  invierno  para  reposar  y  po- 
der resistir  el  trabajo  que  se  le  ha  de  seguir  el  que  viene ,  no 
sé  como  puedan  resistirlo  si  no  es  deshaciéndose  y  enferman- 
do, y  cuando  en  esto  no  hubiese  el  inconveniente  que  digo 
que  es  de  mucha  consideración,  no  sé  como  podria  V.  M. 


516 

por  razón  de  sus  asientos  forzar  á  los  particulares  que  en- 
viasen allí  sus  galeras  al  tiempo  que  se  han  de  meter  á  in- 
vernar para  reposar  del  trabajo  pasado  y  del  que  se  les  ha 
de  seguir  adelante  como  digo ;  pero  ni  ellas  ni  las  de  V.  M. 
estarian  para  servir  el  verano  que  viene.  Cuya  vida  guarde 
Nuestro  Señor  por  tan  largos  años  como  sus  criados  y  vasa- 
llos deseamos  y  la  cristiandad  ha  menester.  De  Mesina  á  2 
de  julio  1566. — Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales 
pies  y  manos  besa. — Don  García  de  Toledo. 

A  S.  M.  por  via  de  Eraso. 

Sobre  de  la  carta. — A  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro 
señor. 

Dentro  de  la  ante-  \  ^^P""  ^^  '^«'''^  ^^  ^'  ^''''''^  '^^ 
rior  se  halla  la  carta  i  Toledo  al  gran  maestre,  fecha  en  Me- 
siguiente :  j  ^-^^^  ^  g  de  julio  de  1566. 

Para  enviar  á  S.  M. 

III.""  y  R."°  Señor: 

No  habiendo  tenido  otras  nuevas  de  la  armada  después 
que  últimamente  envié  á  V.  S.  I.  las  que  me  trajo  D.  Juan 
Zanoguera ,  voy  cada  dia  confirmándome  mas  en  el  pares- 
cer  que  dias  acá  he  tenido,  que  no  viniendo  dicha  armada 
tan  pujante  de  número  ni  de  gente  que  no  deba  tener  algún 
recelo  de  la  de  S.  M.  aunque  está  tan  falta  della,  y  que  por 
la  misma  causa  no  haya  de  osar  emprender  lo  de  ahí ,  y 
ansí  considerando  esto  he  pensado  que  se  podría  comenzar 
á  aliviar  de  costa  á  S.  M.  sacando  de  ahí  los  alemanes;  pero 
no  he  querido  resolverme  en  ello  sin  el  parecer  de  V.  S.  I., 
la  cual  sabe  las  nuevas  postreras  que  tengo  de  la  armada  del 


5i7 

turco,  que  son  las  que  he  enviado  y  las  fuerzas  que  Ucne  ella 
y  las  que  V.  S.  111."*  ha  menester  para  defensa  desa  isla,  y 
ansí  conforme  á  esto  con  su  prudencia  tendrá  la  consideración 
que  les  parescerá  conveniente ,  para  que  S.  M.  no  haga  gasto 
superfluo  sin  evidente  necesidad,  y  ansí  suplico  á  V.  S.  I. 
que  mande  pensar  esto ,  y  me  responda  luego  á  ello  para 
que  enlendídolo  pueda  yo  resolverme  en  lo  que  pareciere 
mas  convenir,  que  para  tal  efecto  despacho  esta. 


Carta  original  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo.  Escorial 
3  de  julio  de  1566. 

Llama  á  Gabrio  Cervellon — Forlificacion  de  Otranto  —  Nuevo 
castillo  en  la  ciudad  de  Ñápeles. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.J 
El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  y  capitán  ge- 
neral :  Entendiendo  cuan  útil  será  la  presencia  de  Gabrio 
Cervellon  para  el  efecto  que  veréis  por  lo  que  se  le  escribe, 
le  enviamos  á  mandar  que  al  fin  deste  verano  cuando  menos 
falta  hiciese  su  persona  se  parta  para  aai,  y  que  pasando  por 
Ñapóles  traiga  entendido  lo  de  la  fortificación  de  Otranto  y 
del  castillo  que  de  nuevo  queremos  fabricar  en  la  ciudad  de 
Ñapóles.  Seremos  servido  que  vos  se  lo  digáis  también  de 
nuestra  parte  y  le  acomodéis  para  su  viaje  de  manera  que 
venga  con  brevedad ,  porque  siendo  aquello  de  tanta  impor- 
tancia y  él  persona  tan  inteligente  y  plática  de  semejantes 
materias  cumple  mucho  que  él  tome  este  trabajo  por  nos 


hacer  servicio.  Del  Escorial  á  3  de  julio  mdlxvi. —  Yo  el 
Rey.  —  Vargas. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey 
del  reino  de  Sicilia,  capitán  general  del  y  de  la  mar. 

Por  bajo  del  sobre. — Del  Escurial — 1566  —  De  S.  M. 
de  3  de  julio  —  Rescebida  en  Jaca  á  15  de  septiembre — So- 
bre la  ida  de  Gabrio  Gervellon. 


Carta  original  del  marqués  de  Pescara  á  D.  Garda  de  To- 
ledo. Malta  11  de  julio  de  1566. 

Sobre  el  despedir  los  alemanes  que  habia  en  Malta. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Ill."°  Señor: 

El  maestre  me  ha  enviado  á  mostrar  la  carta  que  V.  S. 
le  escribe  sobre  el  despedir  los  alemanes,  en  lo  cual  remi- 
tiéndose V.  S.  á  su  parescer  no  sabria  que  decir  sino  que 
el  mió  será  siempre  en  que  por  todas  las  vias  que  fuere  po- 
sible se  procure  que  S.  M.  no  gaste  sino  con  mucho  propó- 
sito y  ocasión,  porque  los  tiempos  y  las  cosas  que  se  van  en- 
conando lo  requieren  mas  agora  que  nunca,  como  V.  S.  lo 
alcanza  con  su  prudencia  mejor  que  yo.  No  siendo  menes- 
ter aquí  estos  alemanes,  pues  es  bien  tener  este  cuidado  en 
todo,  se  ahorrará  también  la  costa  de  mi  persona  y  de  los 
que  sirven  acerca  de  ella,  con  la  cual  iré  á  ver  y  besar  las 
manos  de  V.  S.  en  volviendo  esta  resolución.  Habríase  de 
tener  gran  consideración  con  la  demás  infantería  española, 
porque  como  V.  S.  vée  es  la  fuerza  que  el  Rey  tiene  en  Ha- 


519 

lia  y  aquí  padesce  mucho,  y  según  me  dicen  ios  oflciales 
empieza  á  dolecer  de  mala  manera,  y  convendría  tener  gran 
cuenta  con  que  no  trabajase  en  tanto  grado  sin  manifiesta 
necesidad  que  se  viniese  á  deshacer.  Háme  parescido  avisa- 
lío  á  V.  S.  por  lo  que  veo  que  conviene  al  servicio  de  S.  M. 
y  por  lo  que  yo  deseo  el  de  V.  S.,  cuyo  juicio  sé  que  no  po- 
drá errar  en  nada.  Cuya  III."'  persona  y  estado  guarde  y 
acreciente  Nuestro  Señor.  De  Malta  á  xi  de  julio  1566. 

De  su  letra. 

Besa  las  manos  á  V.  S.  111."*  su  serxidor. — El  marqués 
de  Pescara. 

Sobre. — Al  111."»  señor  el  señor  D.  García  de  Toledo, 
visorey  de  Sicilia  y  capitán  general  de  la  mar  por  S.  M. 


Copia  de  carta  de  D.  Garda  de  Toledo  al  marqués  de  Pes- 
cara. Mesina  11  de  julio  de  1566. 

Noticias  de  la  armada  del  turco. 

f Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.J 

Illmo.  Señor  : 

i.  A  la  carta  de  V.  S.  de  tres  del  presente  tengo  poco  que 
decir  por  ser  breve  y  respuesta  de  otra  mia,  mas  de  que  he 
holgado  mucho  con  ella,  por  saber  que  tuviese  entera  salud, 
que  no  es  poco  según  el  excesivo  calor  hace. 

Del  armada  del  turco  no  hay  otra  nueva  sino  la  que  en- 
vío con  esta  que  se  ha  tenido  por  via  de  Corfú.  A  Juan  An- 


320 

drea  Doria  he  enviado  con  xk  galeras  para  entender  lo  que 
se  pudiere  della,  y  al  conde  de  Altamira  he  enviado  con  al- 
gunas cosas  y  dineros  á  la  Goleta ,  y  que  de  allí  pase  á  sa- 
car la  infantería  italiana  de  Ccrdeña  para  hacer  lo  mismo 
desa  alemana.  Deseo  saber  en  que  se  habrá  resuelto  el  se- 
ñor maestre.  Nuestro  Señor  la  111."^  persona  de  V.  S.  guar- 
de y  en  mayor  estado  acresciente.  De  Mesina  á  11  de  ju- 
lio MDLXVÍ. 

Al  respaldo  se  lee:  Al  marqués  de  Pescara  en  U  de  ju- 
lio de  1566. 

♦oflfifn  e» 
Copia  de  minuta  de  carta  que  el  gran  maestre  escribe  á  den 
Garda  de  Toledo.  De  Malta  á  11  de  julio  1566. 

Sobre  licenciar  á  los  alemanes  de  Malta  y  los  esfuerzos  del 
gran  maestre  para  concluir  la  obra  de  la  nueva  ciudad. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  USO.y 

Para  enviar  á  S.  M. 

Ill."°  y  Iíxc.""  Señor: 

Recibí  la  de  V.  E.  de  2  del  presente  y  he  visto  todo  lo 
que  en  ella  me  escribe.  Yo  he  tenido  y  tengo  el  mismo  pa- 
rescer  que  V.  E.  rae  escribe  tiene  que  la  armada  enemiga 
con  recelo  de  la  nuestra  no  osará  emprender,  siendo  del  nú- 
mero que  hasta  ahora  sabemos,  cosa  por  acá,  y  tanto  mas  se 
puede  hombre  afirmar  en  esto,  teniendo  V.  E.  ahí  junta  la 
armada  de  S.  M.  y  ser  los  tiempos  tan  adelante ,  y  en  espe- 
cial que  después  que  D.  Juan  Zanoguera  la  vio  á  los  25  del 


pasado  debía  haber  con  razoa  comparecido  por  acá.  las 
cuales  causas,  y  que  de  vuelta  nos  traerán  algunos  dineros 
nuestras  galeras ,  nos  ha  parescido  acomodar  de  pasaje  al 
conde  de  Brissac  y  á  estos  gentiles  hombres  franceses  que 
desacomadados  de  muchas  cosas  que  han  menester,  por  ha- 
ber tantos  dias  que  partieron  de  sus  casas  para  venir  en 
nuestra  defensa,  nos  ha  parescido  razonable  dalles  la  de  nues- 
tras galeras  para  que  ios  lleven  hasta  la  playa  de  Roma, 
donde  como  lugar  general  hallará  cada  uno  conoscimiento 
y  modo  para  remediarse  con  que  volver  á  sus  tierras.  Mu- 
chas y  muchas  veces  beso  las  manos  á  V.  E.  por  la  merced 
que  me  hace  en  escribirme ,  que  sin  mi  parescer  no  quiere 
resolverse  en  despedir  estos  alemanes ,  y  siendo  V.  E.  como 
es  en  efecto  prudentísimo ,  es  bien  excusado  que  yo  ni  nadie 
le  dé  en  esto  ni  en  cosa  donde  V.  E.  ponga  la  mano ,  y  así 
me  parescerá  siempre  muy  acertado  todo  lo  que  V.  E.  hicie- 
re en  esto  y  en  todo. 

Para  traerme  gastadores  para  esta  nueva  fábrica  envié 
los  dias  pasados  un  caballero  aposta  á  ese  reino  á  solo  efec- 
to de  traer  esta  gente  donde  ha  residido  por  espacio  de  casi 
tres  meses,  y  con  dalles  harto  dinero  por  su  trabajo,  no  me 
ha  traído  aun  veinte  hombres ,  que  faltando  aquí  tanta  gen- 
te de  la  de  esta  isla ,  asi  por  el  sitio  pasado ,  como  por  ha- 
berse ausentado  con  lecelo  de  la  nueva  venida  de  la  arma- 
da, no  puedo  recoger  los  hombres  que  quería  para  aventajai* 
con  brevedad  la  fábrica  desta  ciudad ,  en  la  cual  tengo  con- 
vertidos todos  mis  pensamientos  y  desiños ,  conosciendo  de 
cuanta  importancia  es  al  servicio  de  la  cristiandad  y  conser- 
vación desta  isla ;  y  para  que  no  se  pierda  ningún  tiempo  en 
esto  me  ha  parescido  platicar  con  estos  alemanes  de  concer- 
tar un  golpe  dellos  hasta  el  número  de  600  para  que  queda- 
sen aquí  pagándoles  su  sueldo  y  un  real  mas  cada  día ,  y  es- 
ToMO  XXX.  21 


toy  en  alguna  manera  casi  concertado  con  ellos ,  y  téngolo 
por  acertado,  porque  computando  lo  que  costarán  los  que 
vienen  ó  vernán  de  Sicilia  hay  poca  diferencia  en  el  interés, 
y  se  suple  largamente  con  que  eslos  siendo  como  son  solda- 
dos los  tememos  ya  recogidos  para  el  año  que  viene  y  an- 
darán siempre  en  la  obra.  En  esto  me  han  señalado  dos  co- 
sas y  aun  tres ;  la  primera  y  segunda  es  que  tienen  concer- 
tado que  les  ha  de  correr  el  sueldo  hasta  que  los  vuelvan  á 
la  Especia,  y  que  se  les  haya  de  dar  media  paga  para  que 
desde  allí  se  puedan  tornar  á  sus  tierras:  á  los  que  queda- 
rán aquí  no  será  menester  cumplir  con  ellos  en  esto,  que  así 
lo  encamino  por  quitar  á  S.M.  deste  gasto.  La  tercera  es 
que  prelienden  que  se  les  deben  algunos  dineros  de  sus  pa- 
gas ,  y  á  los  que  quedarán  aquí  querría  y  paresce  razonable 
se  cumpla  con  ellos,  y  en  esto  querría  V.  E.  me  hiciese 
merced.  Para  que  mas  de  buena  gana  quedasen  aquí ,  be 
querido  que  comiencen  á  trabajar  y  hácenlo  muy  bien,  pero 
ni  aun  esto  me  da  entero  contento ,  que  querría  emplear  en 
esta  obra  todo  cuanto  hay,  y  para  mas  cumplimiento,  aun- 
que los  malteses  que  están  en  ese  reino  entiendo  tienen  vo- 
Imitad  de  volver  á  su  naturaleza ,  para  que  les  mueva  mas 
á  ello  y  sirvan  en  esto ,  querría  que  V.  E.  me  hicese  mer- 
ced de  mandar  que  no  admitiesen  en  las  fábricas  que  en  ese 
reino  se  hacen  á  los  malteses  nascidos  en  esta  isla ,  que  por 
esta  vía  espero  habrá  mas  gente  en  esta  fortificación ,  y  con 
ella  se  evitarán  los  gastos  de  la  gente  que  sería  necesario 
junctar  para  la  defensa  deste  lugar  en  lo  por  venir.  No  se 
maraville  V.  E.  si  me  detengo  tanto  en  esta  plática,  pues 
todos  mis  fines  guian  á  fin  de  ver  en  defensa  esta  nueva  ha- 
bitación. 

**'''   La  infantería  que  aquí  está,  está  tan  bien  disciplinada  y 
viven  con  tanta  regla  y  quietud ,  y  con  tanta  satisfacción  mía 

íl¿  ./././.   OÍ/.OÍ 


^85 

y  (le  todo  el  pueblo  cuanto  se  puede  encarecer,  que  certifi- 
co á  V.  E.  no  puedo  decir  el  sosiego  y  contentamiento  que 
en  lodos  veo,  así  por  lo  bien  que  están  proveidos,  como  por 
lo  que  acá  se  hace  en  su  comodidad ,  aunque  es  bien  verdad 
que  esto  no  puede  ser  sino  muy  poco. 


Dentro  de  la  ante-  (       Copia  de  lo  que  respondió  Su  Exc* 
rior  se  halla  la  carta  I  „/.,_„,/..«   <  ji  j    •   /•    j     i—t- 
siguiente:  i  "'  ^^^^^"^^'^  «  ^-»  dejulto  de  1.íoG. 


Para  enviar  á  S.  M. 

Ill."°  y  Re."»  Señor: 

He  holgado  de  entender  con  cuanla  voluntad  y  gana 
hace, atender  V.  S.  I.  la  fábrica  de  la  nueva  ciudad  que  no 
dudo  dello  sabiendo  de  cuanta  importancia  es  el  asegurarlo 
de  ahí  de  manera  que  no  se  haya  de  ver  esa  santa  religión 
en  el  trabajo  y  aflicción  que  estos  años  pasados,  y  todo  lo 
que  V.  S.  me  escribe  y  dice  en  este  particular  es  muy  bien 
considerado.  Y  en  lo  que  toca  á  los  tudescos  que  han,  (Je 
quedar  á  la  fábrica  y  servicio  de  lo  de  ahí,  yo  haré  que  sean 
pagados  de  lo  que  justamente  hubieren  de  haber,  por  lo  que 
han  servido  á  S.  M. ,  y  también  he  dado  luego  orden  que  no 
se  consienta  ni  permita  en  esle  reino  trabajar  ni  llevar 
sueldo  á  ningún  maltes  oascido  en  esa  isla ,  pues  dice  V.  S.  I. 
que  conviene  ansí  para  que  con  mas  brevedad  se  vuelvan 
y  puedan  asistir  á  esas  fábricas,  y  no  tan  solamente  esto, 
pero  todo  lo  demás  que  yo  pudiere  hacer  y  viere  que  con- 
viene en  beneficio  de  las  cosas  de  ahí ,  y  lo  haré  con  muy 
grande  voluntad. 

A  Juan  Andrea  Doria  espero  de  dia  en  dia.  De  lo  que 


o24 

trajere,  daré  aviso  á  V.  S.  I.,  y  conforme  á  lo  que  habrá  del 
armada ,  ansí  me  resolveré  en  sacar  los  alemanes  de  ahí  y 
después  la  demás  gente. 


Copia  de  carta  oriíjinal  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M., 
fecha  en  Mesina  á  16  dejidio  de  15G0. 


Envía  á  diversos  puntos  galeras  y  tropas  para  defenderlos  de  la 
escuadra  del  turco — D.  Alvaro  de  Madrigal. 


(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  HoO.^ 
S.  C.  R.  M. 

«<=  A  los  28  del  pasado  screbí  á  V.  M.  lo  que  se  ofrescía  y 
envié  la  relación  que  habia  traído  D.  Juan  Zanoguera  del 
armada  del  turco ,  y  después  á  los  2  deste ,  con  un  correo 
que  despachó  el  marqués  de  Pescara ,  respondí  á  los  demás 
cabos  de  las  cartas  de  V.  M. ,  y  no  habiendo  rescibido  des- 
pués acá  ninguna,  será  esta  para  dar  cuenta  á  V.  M.  de  lo 
que  se  ofresce,  y  es  que  viendo  que  después  de  la  última 
nueva  que  trajo D.  Juan,  como  digo,  no  se  sabe  otra  de  la 
armada  del  turco  excepto  la  que  va  con  esta  que  me  ha  ve- 
nido de  Corfú ,  me  paresce  que  se  puede  creer  que  ya  no 
bajará  por  acá ,  ni  que  irá  á  parte  que  haga  daño  de  mo- 
mento ,  y  que  estando  tan  bajo  lo  de  Gerdeña  estaba  mas  se- 
guro de  llegar  á  ello ;  y  por  aliviar  á  V.  M.  del  gasto  que 
allí  se  tiene  con  la  infantería  italiana  que  llevó  Césaro  de 
Ñapóles  en  las  galeras  de  D.  Alvaro  de  Bazan,  que  llegó  aquí 
á  los  2  deste ,  he  enviado  al  conde  de  Altamira  con  veinte 
galeras  acompañado  de  algunos  capitanes  y  buenos  marine- 


ros  para  que  el  viaje  y  navegación  se  liaga  con  la  seguridad 
y  consideración  que  conviene  al  servicio  de  V.  M. .  el  cual 
partió  de  aquí  á  los  7  y  lleva  á  D.  Alonso  Piínentel  algunas 
provisiones  que  de  aquí  ha  querido,  y  el  mas  dinero  que  se 
le  ha  podido  enviar,  que  fueron  doce  mil  escudos  á  cumpli- 
miento de  los  40  mil  que  V.  M.  le  mandó  proveer  el  año  pa- 
sado, y  veinte  mil  á  cuenta  del  presente  que  V.  M.  me  ha 
escrito  para  socorrer  aquella  gente ;  y  como  llegue  el  de 
Genova ,  se  le  proveerá  de  mas.  También  ha  llevado  cient 
gastadores  de  Palermo ,  y  se  enviarán  los  demás  á  cumpli- 
miento de  docientos.  De  allí  pasará,  como  digo,  á  Cerdeña, 
y  lomará  la  dicha  gente  y  la  irá  á  desembarcar  en  Liorna, 
que  es  lo  mas  cerca,  para  que  pueda  volver  aquí  con  mas 
brevedad.  Lleva  en  las  galeras  seis  compañías  de  infantería 
española  de  las  del  tercio  de  Ñapóles ,  cuatro  de  las  que  no 
habían  ido  aun  á  la  Goleta,  y  dos  de  las  que  quedaron  allí, 
porque  aquí  no  habia  gente  que  poner  en  ellas ,  y  he  orde- 
nado al  conde  que  no  teniendo  nuevo  aviso  mío  qué  lo  im- 
pida que  las  deje  á  su  pasada  en  Gaeta ,  porque  el  duque  de 
Alcalá  pueda  con  mas  seguridad  aliviar  de  gasto  lo  de  allí. 

He  scrito  á  D.  Alonso  Pimentel  que  pues  el  armada  va 
dando  lugar  para  ello ,  que  debe  hacer  poner  mano  y  dar 
priesa  en  la  fortificación  que  ha  de  quedar  conforme  al  de- 
signo que  V.  M.  mandó  enviar  con  el  Fralin,  de  tal  manera 
que  no  sea  menester  el  año  que  viene  dar  á  V.  M.  nuevo 
cuidado  de  poner  allí  mas  gente  de  la  ordinaria  que  ha  de 
residir ;  y  pienso ,  placiendo  á  Dios ,  en\  ialle  este  agosto ,  si 
no  hay  causas  justas  que  me  lo  estorben ,  algunas  galeras 
que  con  la  gente  dellas  asistan  allí  por  todo  setiembre ,  por- 
que se  dé  una  buena  ayuda  á  la  labor ,  y  de  aquí  no  se  fal^ 
lará  de  hacer  lodo  cuanto  se  pudiere  para  que  aquello  se 
ponga  en  perfección,  como  no  se  ha  dejado  por  lo  pasado. 


326 

Y  parcsciéndome  que  el  armada  del  turco  no  podría  dejar 
de  enviar  algunas  fuslas  á  tornar  lengua  en  el  reino  de  Nú- 
peles,  tanto  mas  habiendo  visto  las  dos  galeras  de  V.  M. 
que  la  descubrieron,  he  enviado  á  Juan  Andrea  con  doce 
galeras  para  ver  si  pudiese  topar  con  ellas  y  tomar  lengua 
de  lo  que  hace  la  armada,  para  conforme  á  ello  poder  tomar 
mas  firme  resolución  en  lo  que  se  habrá  de  hacer  desta 
gente ,  y  le  he  ordenado  que  no  pudiendo  tomar  lengua  por 
esta  vía,  que  envíe  dos  galeras  bien  reforzadas  mas  adelante 
para  saber  lo  que  hace,  y  de  lo  que  trujere  se  dará  aviso 
áV.  M. 

Don  Sancho  de  Leí  va  volvió  ayer  del  Gitraro  y  trajo  los 
seis  buques  que  allí  se  habian  fabricado ,  los  cuales  se  tira- 
rán en  tierra  para  que  estén  mas  conservados ,  pues  por  las 
causas  dichas  de  no  bajar  el  armada  no  son  menester  al  pre- 
sente; y  por  la  misma  y  ahorrar  el  gasto  que  se  tiene  con 
los  remeros  de  buena  bolla  que  vinieron  del  reino  de  Ñapó- 
les, he  ordenado  á  D.  Juan  de  Villarroel  quie  les  dé  licencia 
para  que  se  vuelvan  á  sus  casas ,  y  he  escrito  al  duque  de 
Alcalá  que  mande  suspender  los  demás  que  faltaban  y  habian 
de  venir  para  este  efecto. 

Las  galeras  de  D.  Alvaro  de  Bazan  se  han  comenzado  á 
proveer  de  lo  necesario ,  y  se  hará  de  lo  demás  que  hubieren 
menester,  como  V.  M.  lo  tiene  mandado,  y  yo  procuraré, 
no  habiendo  impedimento  lejítimo,  que  parta  de  aquí  dicho 
D.  Alvaro  á  los  diez  del  que  entra,  y  enviaré  también  otra 
mano  de  galeras  para  que  puedan  estar  esas  costas  con  mas 
seguridad. 

El  prior  D.  Hernando  llegó  aquí  dos  dias  ha  de  Malta,  y 
habiendo  escrito  al  maestre  y  al  marqués  de  Pescara  que  me 
parescia  que  pues  el  armada  del  turco  da  lugar  para  ello 
con  no  dar  muestra  de  venir  allí  ni  en  otra  parte  de  las  de 


527 

acá,  que  se  podrían  sacar  aquellos  alemanes  y  ahorrar  á 
V.  M.  el  gasto  que  con  ellos  se  recresce  que  no  es  poco ,  me 
ha  respondido  el  maestre  con  el  dicho  prior  lo  que  V.  M. 
verá,  y  ansimismo  lo  que  yo  le  he  replicado,  como  venga 
Juan  Andrea,  y  visto  lo  que  trae  de  la  armada,  me  resolveré 
conforme  á  ello  en  sacar  los  tudescos  y  la  demás  gente. 

Yo  screbí  diversas  veces  al  duque  de  Alcalá  que  me  avi- 
sase qué  gente  española  queria  que  le  enviase  para  cumplir 
aquel  tercio  conforme  á  lo  que  V.  M.  me  mandó  en  el  mes 
de  diciembre  pasado,  y  no  me  ha  respondido  hasta  agora,  y  lo 
que  dice  sobre  ello,  verá  Y.  M.  por  el  capítulo  de  su  carta 
que  será  con  esta.  De  manera  que  no  habiéndose  de  dar  mas 
que  al  duque  de  Alburquerque  la  gente  que  habrá  menester 
para  henchir  el  número  que  creo  serán  hasta  setecientos  ó 
ochocientos  hombres,  y  no  habiendo  de  quedar  en  este  ter- 
cio mas  de  dos  mil  que  ya  los  hay,  sobrará  buen  golpe  de 
gente  al  maestre  de  campo  D.  Gonzalo  de  Bracamonte,  y 
será  necesario  que  vuelva  á  alojar  con  ellos  en  Cerdeña.  Helo 
querido  avisar  á  V.  M.  para  que  entienda  lo  que  hay  en  ello, 
y  pueda  mandar  al  visorey  de  Ñapóles  lo  que  mas  será  ser- 
vido, porque  se  pueda  ejecutar  con  brevedad  y  saber  lo  que 
se  ha  de  hacer  con  el  dicho  D.  Gonzalo  en  caso  que  se  en- 
tremeta la  gente  de  su  cargo  en  otras  partes,  ó  si  manda 
como  será  forzoso  que  vuelvan  á  alojar  en  Cerdeña ,  certifi- 
cando á  Y.  M.  que  el  tercio  de  Ñapóles  con  mas  de  doscien- 
tos no  llega  á  tres  mil  hombres. 

A  lo  que  he  conoscído  y  v  isto ,  y  últimamente  esta  vez 
que  he  estado  en  Cerdeña ,  me  paresce  que  sirve  muy  bien  á 
V.  M.  D.  Alvaro  de  Madrigal,  y  con  mucha  limpieza  y  deseo 
de  aprovechar  y  acrecentar  la  hacienda  de  Y.  M.,  y  de  ma- 
nera que  meresce  le  haga  Y.  M.  merced,  y  porquél  ha  mu- 
chos años  que  no  está  en  España ,  por  lo  cual  padescen  al- 


gunos  negocios  y  cosas  suyas,  para  lo  cual  es  necesario  su 
presencia,  suplico  á  V.  M.  que  de  seliembre  adelante  le  con- 
ceda licencia  por  cinco  ó  seis  meses  para  entender  en  esto 
que  tanto  le  importa,  pues  volverá  á  servir  allí  á  tiempo  que 
no  haga  falta,  y  contentándose  V.  M.  de  dársela,  será  ser- 
vido de  mandárselo  scribir,  y  á  mi  avisar  dello.  Y  Nuestro 
Señor  la  vida  de  V.  M.  guarde  por  largos  años  como  la  cris- 
tiandad ha  menester.  De  Mesina  á  16  de  julio  1566. — Cria- 
do y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. — ■ 
—-Don  García  de  Toledo. 

Olra  caria  suya  de  fecha  de  20  de  julio  de  1566. 

S.  C.  R.  M.  —  x\  los  diez  y  ocho  del  présenle  screbí  á 
V.  M.,  el  duplicado  de  lo  cual  envío  con  esta,  que  consiste 
en  los  avisos  que  Juan  Andrea  Doria  trajo  de  la  armada  del 
turco,  después  acá  no  hay  otra  nueva  della;  de  lo  que  se 
entendiere  daré  aviso  á  V.  M.  En  esta  diré  que  viendo  por 
la  relación  que  Juan  Andrea  hace  que  la  armada  ha  entrado 
en  golfo,  y  que  según  esto  se  puede  tener  por  cierto  que  no 
vendrá  en  estas  partes  á  hacer  daño  en  tierras  de  V.  M.  ni 
de  sus  subditos,  he  deliberado  por  ahorrar  á  V.  M.  de  la 
costa  que  con  los  alemanes  se  liene  en  Malta,  y  por  lo  que 
abajo  diré,  de  enviar  á  D.  Alvaro  de  Bazan  con  diez  y  seis 
galeras  á  que  los  saque  de  allí  y  lleve  á  desembarcar  en  la 
Specie,  y  porque  ya  este  verano  no  se  podj-á  hacer  mas  que 
asegurar  las  costas  por  estar  la  gente  dividida  en  las  parles 
que  V.  M.  ha  mandado,  he  ordenado  al  dicho  D.  Alvaro  que 
con  las  nueve  galeras  de  su  cargo  se  vaya  la  vuelta  del  Es- 
trecho de  Gibraltar,  y  para  que  se  aseguren  mas  aquellas 
costas,  envío  juntamente  con  él  al  comendador  Gil  de  An- 
dratla  con  diez  galeras  que  son  las  de  Lucían  Centurión  y 


las  Lomelinas,  y  las  dos  que  tiene  á  cargo  el  dicho  comen- 
dador, y  que  todas  juncias  pasen  hasta  allí,  porque  no  obs- 
tante que  habia  escrito  á  V.  M.  que  las  baria  partir  de  aquí 
á  los  10  de  agosto,  me  ha  parecido  anticipar  este  tiempo  por 
asegurar  los  navios  que  pudiesen  venir  de  Indias  y  esas  cos- 
tas de  los  bajeles  de  cosarios,  y  hecho  esto  se  podrá  quedar 
D.  Alvaro  á  invernar  en  el  puerto  de  Santa  María,  y  Gil  de 
Andrada  con  las  diez  se  vendrá  á  hacello  á  Cartagena ,  si 
V.  M.  no  manda  otra  cosa.  Envío  con  estas  galeras  al  dicho 
Gil  de  Andrada  por  la  práctica  y  experiencia  que  tiene  deste 
ejercicio ,  y  porque  según  lo  que  he  visto  basta  agora  creo 
cierto  que  acertará  á  servir  á  V.  M.  en  ello,  y  en  lodo  lo 
que  se  le  ordenare.  V.  M.  podrá  mandarle  allí  lo  que  mas 
conviniere  á  su  servicio  (1),  y  esta  ida  de  galeras  hasta  el 
estrecho,  paresciéndole  á  V.  M.  podrá  mandar  que  se  tu- 
viese secreta ,  porque  los  bajeles  de  enemigos  no  la  supiesen 
antes  de  su  llegada.  A  las  ocho  galeras  de  particulares  po- 
drá V.  M.  mandar  proveerlas  allá  de  lo  que  hubieren  me- 
nester á  cuenta  de  su  sueldo  y  asientos,  pues  son  de  las  que 
se  pagan  á  cuenta  del  subsidio.  A  las  dos  de  Gil  de  Andrada, 
no  se  ha  de  dar  ninguna  cosa ,  porque  de  acá  van  proveídas 
de  todo  lo  necesario  para  el  tiempo  que  allá  estuviere ,  y 
pues  V.  M.  sabe  la  necesidad  que  hay  de  remeros,  conven- 
drá á  su  servicio  que  mande  se  recojan  todos  los  condenados 
que  allá  hubiere  para  que  con  ellos  se  puedan  rehacer  estas 
galeras,  y  los  que  sobraren  para  las  que  de  nuevo  se  arma- 
rán ,  porque  los  puedan  traer  estas  galeras  á  su  vuelta. 

A  Juan  Andrea  Doria  envío  esta  noche  con  dos  galeras 
bien  armadas  á  Genova ,  para  que  traiga  el  dinero  que  allí 


(1)  Al  margen  flicc  de  letra  del  Rey :  Mírese  en  ato  lo  que  con- 
vendrá mas. 


350 

hay  en  poder  del  embajador,  porque  se  halle  aquí  para  pa- 
gar la  infantería  que  se  despedh"á  así,  de  Lombardía  como 
del  tercio  de  D.  Gonzalo,  y  lo  demás  que  no  se  podrá  excu- 
sar. También  parte  en  esta  hora  D.  Sancho  de  Leiva  para 
la  Goleta  á  sacar  de  allí  mil  españoles  del  tercio  de  Ñapóles, 
ansí  porque  no  gasten  las  vituallas,  como  para  que  residan, 
Gil  las  galeras,  por  haber  enviado  los  otros  mil  que  me  pidiá 
el  duque  de  Alcalá.  Ansí  corno  lo  he  escrito  á  V.  M.,  Juan 
Ambrosio  de  Negron,  que  trae  las  galeras  de  Lucían  Centu- 
rión ,  me  ha  pedido  un  buque  de  galera  de  las  que  están  en 
Barcelona,  diciendo  que  tiene  mucha  necesidad  del.  Yo  le 
he  respondido  que  ocurra  á  V.  M.,  la  cual  si  fuere  servido 
se  Jo  podrá  mandar  dar,  y  que  se  advierta  que  no  los  han 
de  haber  los  particulares  por  el  precio  que  se  hacen  para 
V.  M.,  sino  conforme  á  como  á  ellos  les  costarian  haciéndo- 
los fabricar.  Y  Nuestro  Señor  guarde  la  vida  de  V.  M.  por 
largos  años  como  la  cristiandad  ha  menester.  De  Mesina  á 
20  de  julio  1566.~Criado  y  vasallo  de  V.  M,  que  sus  rea- 
les pies  y  manos  besa. — Don  García  de  Toledo. 

..  on 

¡I  3«p  bííhiei) 


•3 

:ii'í 


^ 


Copia  de  carta  oriijinal  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M., 
[echa  en  Mesina  ¿18  de  julio  de  1566. 

Le  manda  una  relación  de  Juan  Andrea  de  Oria  ,  á  quien  había 
«nviado  á  levante  para  saber  noticias  de  la  armada  turca. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  WóQ.) 

S.  C.  R.  M. 

A  los  16  del  presente  escribí  á  V.  M.  dándole  aviso  de  lo 
que  hasta  aquella  hora  se  ofrescia ,  y  dije  como  estaba  espe- 
rando de  dia  endia  á  Juan  Andrea  Doria  que  habia  ido  con  12 
galeras  en  levante  á  procurar  de  saber  nueva  cierta  de  la  ar- 
mada, el  cual  ha  llegado  esta  mañana:  y  lo  que  refiere  y  ha 
entendido  della  verá  V.  M.  por  su  relación  que  va  con  esta, 
á  la  cual  me  remito.  De  lo  demás  que  se  entendiere  della  y 
de  la  determinación  que  se  tomara  en  lo  que  por  acá  hay 
que  hacer  en  servicio  de  V<  M^',  daré  siempre  particular 
aviso ;  y  habiendo  entrado  la  armada  en  el  golfo  como  Juan 
Andrea  refiere ,  muestra  claro  que  no  tiene  designo  sobre  lo 
de  por  acá,  ansí  no  ofresciéndose  otra  cosa  que  lo  impida, 
enviaré  á  sacar  los  tudescos  de  Malla ,  ansí  como  lo  tengo 
escrito  á  V.Mijícüya  real  persona  Nuestro  Señor  guarde  por 
largos  años  como  la  cristiandad  ha  menester.  De  Mesina 
á  18  de  julio  1566. — Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus 
reales  pies  y  manos  besa.— Don  García  de  Toledo. 

•i'  Sobrede  h  carta. — A  la  8.i€:  R.  M.  del  Rey  nuestro 
sefifOV.  )  tíJü^iiifl  h  iiih  9h  lovóh  utJ  is^ 

'i.tí»oüq  ijt! 


m^ 


ftteLAtiON  que  hace  Juan  Andrea  del  viaje  que  ha  hecho 
en  levante  á  lomar  lengua  del  armada  del  turco. 

Habiendo  partido  deste  puerto  de  Mesina  con  doce  gale- 
ras por  orden  del  Illrno.  y  Excrno.  Sr.  D.  García  de  Toledo, 
capitán  general  por  S.  M.  en  la  mar ,  á  los  9  deste  presente 
mes  de  julio  para  ir  á  saber  nueva  del  armada  del  turco,  fui 
costejando  la  Calabria  hasta  Otron ,  á  donde  llegué  á  los  10 
en  la  tarde.  A  los  11  por  la  mañana  me  partí  y  fui  á  tomar 
tierra  á  los  12,  antes  que  amanesciese ,  al  cabo  de  Santa 
María ,  y  no  pudiendo  atravesar  la  vuelta  del  Fano ,  ques 
una  isla  puesta  en  el  canal  de  Corfú,  como  era  mi  intención 
por  tener  viento  contrario  que  eran  jaloques,  llegué  á  Olranlo 
})or  ver  si  allí  tenían  alguna  nueva  del  armada ,  y  el  mismo 
dia  llegó  una  fragata  de  Corfú  con  una  carta  de  César  Palma, 
que  es  un  hombre  que  está  en  esa  isla  por  orden  del  señor 
D.  García,  de  los  10,  en  que  escrebia  que  la  dicha  armada 
habia  entrado  el  mesmo  dia  en  el  dicho  canal ,  y  el  patrón 
de  la  fragata  dijo  lo  mismo,  y  que  se  habían  contado  140 
velas.  Y  yo  salí  de  Otranto  á  los  15  habiendo  calmado  el 
jaloque,  y  pueslóse  un  poniente  y  maestre  muy  fresco,  y  ví- 
neme  al  cabo  de  Santa  María ,  á  donde  páresela  quel  armada 
hubiese  de  tomar  tierra  si  tenia  intención  de  pasarse  á  los 
reinos  de  S.  M,  y  visto  que  no  se  descubrían  navios ,  y  con- 
siderando que  el  tiempo  sufría  que  hubiesen  podido  allegar, 
pues  á  los  10  estaba  el  armada  en  canal,  determiné  atravesar 
la  vuelta  del  Pacxo ,  ques  otra  isla  poco  mas  allá  de  Corfú, 
y  púselo  por  obra  y  tuve  el  tiempo  tan  favorable  que  sin  lle- 
gar tan  cerca  de  dia  á  ninguna  de  esas  islas  que  me  pudie- 
sen descubrir  llegué  á  los  1  i  antes  del  dia  al  Pacxo  ,  y  pú- 
some encubierto  de  la  parle  ds  fuera;  y  dende  allí  puestas 


mis  guardias  de  todas  parles  envié  una  fragata  coo  hombre 
de  recaudo  á  Corfú  á  saber  del  armada ,  y  estando  la  fragata 
ya  cerca  de  la  isla,  le  salió  una  galeota  y  dióle  caza  hacia  la 
parte  donde  yo  estaba;  pero  no  se  atrevió  á  apretarla,  tenien- 
do por  ventura  recelo  de  la  isla ,  de  manera  que  no  yo  pude 
salir  á  ella.  Llegó  la  fragata,  y  tomada  del  patrón  la  infor- 
mación que  supo  darme  de  la  galeota,  determiné  en  anoche- 
ciendo irme  hacia  aquella  parte  á  donde  se  podia  pensar  que 
estuviese  la  galeota  por  el  camino  de  dentro  ja  isla ,  que  por 
de  fuerano  se  podia  por  el  viento  grande  que  hacia  contrario, 
f  poniéndolo  por  obra  llegué  cerca  de  Corfú,  y  no  hallando 
á  la  galeota  envié  otra  vez  la  fragata  á  la  dicha  isla  á  tomar 
lengua  y  volvíme  antes  que  amanesciese  á  la  parte  donde 
solia  estar  con  las  galeras  al  Pacxo ,  y  á  mediodía  volvió  la 
fragata  y  me  trajo  por  escrito  las  nuevas  que  habia  en  la  isla 
y  de  personas  á  quien  se  puede  creer,  y  son  estas  siguientes: 

Que  el  armada  entró  en  el  canal  el  miércoles  á  los  10, 
y  porque  no  saludó  como  solia  no  le  enviaron  de  la  isla  el 
presente,  y  sin  hacer  ningún  daño  se  entretuvo  por  allí  hasta 
el  viernes  en  la  noche  que  se  partió  la  vuelta  de  la  Bclona, 
y  el  sábado  la  topó  una  nave  veneciana  sobre  Tradablanca, 
que  es  cerca  de  la  Belona  como  veinte  millas,  y  no  le  dio 
ningún  fastidio.  Dicen  que  son  100  galeras  y  como  20  ga- 
leotas, y  de  tres  esclavos  que  dellas  han  huido  han  entendido 
que  van  á  Fiume.  ir 

Habiendo  con  esto  cumplido  la  orden  que  tenia  de  solo 
procurar  de  saber  del  armada  sin  pasar  de  Corfú  y  limpiar 
de  camino  esta  costa  de  cosarios ,  me  partí  la  mesma  noche 
délos  15,  y  esta  mañana  que  se  cuentan  18  de  julio  he  lle- 
gado aquí ,  á  Dios  gracias. 


su 

Copia  de  caria  de  D.  García  de  Toledo  al  marqués  ée^Pie»A^ 
cara.  20  de  juU&} 4e  1 5 OG . 

Salida  de  jos  soldados  alemanes  do  Malta.  u 

(Archivo  del  Excnio.  Sr '..duque  de  Medinasidonia.)  -^ 

lOq  91!;  -- :.i  I¿LMoai8EÑhR:    , 

,011  fi'i  1 :  oítp  f)f)nf>ip^  oJíi oív  h  lóq  fiiítoq  8«  c 

He.fescibido  la  carta  de  V.  S.  de  xi  del  pasado  en  res* 
puesta  de  la  mia  que  llevó  el  señor  prior,  y  he  visto  por  ella 
lo  que  V.  S.  dice  acerca  la  salida  de  los  alemanes,  remi- 
tiéndose al  parescer  del  gran  maestre,  y  que  el  de  V,  S.  es 
qtie  S.  M.  no  gaste  sino  con  mucho  propósito  y  ocasión,  y 
todo  lo  demás  que  sobre  esta  materia  me  escribe  es  muy  bien 
dichoi  Y  porque  como  V.  S.  verá  por  la  relación  que  será 
con  esta,  hecha  por  el  señor  Juan  Andrea ,  la  armada  del 
turco  ha  entrado  en  el  Golfo,  y  con  desino  según  se  ha  en- 
tendido que  irá  la  vuelta  de  Fiume  ó  á  otra  parte  en  el  dicho 
golfo..  Paresce  que  según  esto  y  estar  el  tiempo  tan  ade- 
lante que  se  puede  tener  por  cierto  que  no  irá  á  hacer  daño 
en  cosas  de  S.  M.  ni  de  sus  subditos,  he  deliberado  por  ali- 
viar á  S.  i\L  del  gasto  que  se  puede,  de  enviar  á  sacar  estos 
alemanes,  y  ansí  lo  escribo  al  señor  maestre.  V.  S.  será 
servido  de  mandar  que  se  despachen  de  ahí  con  la  mas  bre- 
vedad que  fuere  posible  y  que  sean  proveídos  de  la  victualla 
que  habrán  menester  conforme  á  lo  que  dirá  á  V.  S.  el  vee- 
dor D.  Juan  de  Villarroel ,  y  al  señor  maestre  podrán  quedar 
habiéndolo  concertado  con  ellos  los  600  alemanes  que  me 
scribió,  que  el  dicho  D.  Juan  de  Villarroel  lleva  orden  para 
que  se  les  pague  lo  que  justamente  hubieran  de  haber  hasta 


el  día  que  se  irán  de  ahí  los  demás ,  y^ü  lo  qHC  'V'i  S.  dice 
que  saliendo  los  alemanes  se  podrá  ahorrar  !a  cosía  de  S» 
persona  y  de  los  demás  que  están  acerca  de  ella,  e«  oslo 
rae  remito  á  la  mejor  deliberación  que  á  V.  S.  le  paréscétó 
hacer.  " '  '^^ 

At  respaldo  se  lee:  marqués  de  Pescara  en  xx  de  ju- 
lio 4  5G6.  '«93  «í 


CñHtt  original  de  D.  Garcid  ñff'^óleMáS.  M.  represen- 
tando los  inconvenientes  de  que  las  (jaleras  vaijan  á  in- 
'ú^nár  á  Malta  según  lo  solicita  el  fíiaesfrei  fecha  en 
Mesina  á  21  de  julio  1566. 

(Archivo  general  de  Simancas.  —  Negociado  de  Estado,  legkjó 
♦  núm.  1130.^ 

S.  C.  R.  M. 

A  los  dos  del  presente  escribí  á  V.  M.  que  habia  enten- 
dido que  el  maestre  habia  escrito  á  V.  M.,  ó  que  pretendía 
hacerlo  pidiendo  á  V.  M.  una  mano  de  galeras  que  asistie- 
sen allí  este  invierno  para  que  la  gente  deltas  trabajase 
en  la  fábrica  que  se  hace,  y  dije  que  á  las  de  particulares, 
no  sabia  con  qué  razón  se  les  pudiese  mandar  que  hiciesen 
allí  dicha  residencia  por  ser  fuera  de  su  capitulación ,  y  que 
las  de  V.  M.  seria  destruillas ,  por  las  causas  que  entonces 
dije ,  y  porque  de  nuevo  entiendo  que  hace  instancia  sobre 
este  particular,  me  ha  parescido  tornar  á  decir  á  V.  M.  que 
si  se  las  concede  que  será  la  total  destrucción  de  las  galeras 
que  fueren ,  porque  tras  un  trabajo  como  el  que  habrán  pa- 
sado en  Cl  vershioi  en  lugar  de  reposar  envialles  á  invernar 


556 

adonde  le  ternán  doblado,  V.  M.  puede  pensar  cual  estará 
la  chusma  para  salir  á  servir  la  primavera  que  creo  serán 
muchos  muertos ,  y  los  mas  enfermos ,  y  para  que  V.  M. 
vea  que  esto  es  ansí ,  y  cuan  excesivo  es  el  trabajo  le  hago 
saber  que  con  haber  tenido  el  maestre  allí  desde  que  se  alzó 
el  asidio  sus  galeras ,  hasta  agora  nunca  ha  permitido  que 
la  gente  deltas  trabajase  en  la  fábrica  que  hace ,  y  siendo 
esto  como  digo,  cuanto  menos  conviene  que  lo  hagan  las 
de  V.  M.  Guarde  Nuestro  Señor  la  vida  de  V.  M..  por  tan 
largos  años  como  sus  criados  y  vasallos  deseamos  y  la  cris- 
tiandad ha  menester.  De  Mesina  á  21  de  julio  de  i 566. — 
Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. 
— Don  García  de  Toledo. 

Sobre  de  la  carta.— A.  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro 
señor. 


Carta  de  D.  Sancho  de  Londoño  al  duque  de  AlburquerquCt 
gobernador  de  Milán.  Malla  25  de  julio  de  1566. 

Llegada  de  D.  Alvaro  de  Bazan  á  Malta  con  diez  y  ocho  gale- 
ras para  embarcar  á  los  alemanes— Regresa  con  ellos  el  marqués  de 
Pescara—Lentitud  en  la  construcción  de  la  nueva  ciudad  en  aque- 
lla isla. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  H30  J 

III."**  y  Excmo.  SENon  : 

,:;;  Después  que  el  prior  partió  de  aquí  á  los  doce  de  julio, 
viendo  que  la  nueva  de  venir  la  armada  no  continuaba, 
creían  muchos  que  si  vuelto  Juan  Andrea  de  levante  no  tor- 
naba ú  refrescar,  enviaría  luego  el  Sr.  D.  García  galeras  á 


sacar  toda  esta  gente,  y  llevarla  á  sus  presidios,  á  lo  meaos 
la  que  hace  costa  á  S.  M.,  que  son  los  tudescos  del  conde 
Alberico  y  las  diez  banderas  de  mi  cargo,  en  cuyo  lugar  está 
en  el  Piamonle  la  coronelía  de  el  conde  Baptisla  de  Arcos. 
Mas  hánse  engañado ,  porque  anoche  llegó  D.  Alvaro  de  Ba- 
zan  con  diez  y  ocho  galeras  á  sacar  solamente  los  alemanes: 
partirán  para  Mesina  dia  de  Santiago.  El  marqués  de  Pesca- 
ra se  ha  determinado  de  ir  con  ellos ,  nosotros  quedaremos 
en  este  escollo  por  algunos  dias.  Plegué  á  Dios  no  sean  tan- 
tos que  hayamos  de  ir  después  á  Somorgujo  como  el  año  pa- 
sado ,  ó  por  mejor  decir  quedarnos  parte  por  el  mal  pasar 
de  aquí  y  de  la  mar,  que  no  puede  dejar  de  consumir  algu- 
nos, parte  por  excusar  el  trabajo  de  ir  á  Lombardía,  si  han 
de  volver  cada  verano ,  á|  lo  menos  el  venidero  no  parece 
que  se  podrían  excusar  según  va  lentamente  la  forlificacion 
de  la  nueva  ciudad ,  porque  en  esta  isla  hay  pocos  gastado- 
res, y  aunque  son  buenos,  no  bastan.  El  maestre  querría 
que  quedasen  seiscientos  alemanes  de  paga  sencilla,  la  cual 
les  prometia  y  un  real  cada  dia  demás  de  ella ,  con  que  se 
obligasen  á  trabajar,  ó  perdiesen  la  paga  el  tiempo  que  no 
trabajasen;  pero  por  este  postrer  capitulo  de  el  perder  la 
paga ,  ninguno  ha  querido  venir  hasta  agora  en  ello ,  ni  creo 
que  vernán,  así  que  si  no  se  traen  dos  ó  tres  mil  gastadores 
de  fuerza ,  no  perderá  el  enemigo  la  esperanza  de  haber  esto 
el  año  que  viene ,  y  será  necesario  acudir  como  este  á  la 
defensa  de  ello  con  seis  ó  ocho  mil  hombres.  No  me  ocurre 
otra  cosa  que  escribir  á  V.  E.,  cuya  111."'  y  Excma.  perso- 
sona  guarde  y  felicite  Nuestro  Señor  como  los  criados  de 
V.  Ex. ''deseamos.  En  Malta  á  23  de  julio  de  1666.— III."**  y 
Ex.""  señor. — Besa  las  manos  de  V.  E.  su  servidor. — San- 
cho de  Londoño. 

Sobre. — Al  111.""  y  Ex."®  señor  el  duque  de  Alburquer- 
ToMO  XXX.  22 


558 

que,  etc.,  capilan  general  y  lugar  teniente  de  S.  M. — En 
Milán. 


Copia  de  carta  original  de  D.  Sancho  de  Londoño  á  S.  M., 
fecha  en  Malla  á  25  de  julio  de  1566. 

Regreso  del  marqués  de  Pescara  á  Mesina  —  Número  de  personas 
que  trabajaban  en  la  nueva  ciudad  de  Malta — Infantería  que  que- 
daba en  ella. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1130.) 

S.  C.  R.  M. 

Hoy  dia  de  Santiago  sale  de  aquí  el  marqués  de  Pescara 
y  la  coronelía  del  conde  Alberico ;  quedan  las  diez  compañías 
del  cargo  de  D.  Gonzalo  de  Bracamente,  y  las  cinco  de  Si- 
cilia que  están  á  cargo  de  D.  Pedro  de  Padilla,  y  las  diez 
que  son  á  mi  cargo ,  en  todas  habrá  cuatro  mil  y  quinientos 
soldados  de  servicio ,  con  los  cuales  estará  esto  seguro  de  la 
armada  que  por  ogaño  podría  venir.  Para  el  venidero  con- 
vernía  dar  priesa  á  la  fortificación  de  la  ciudad  nueva  que 
va  lentamente,  porque  en  esta  isla  hay  pocos  gastadores,  y 
así  no  trabajan  mil  personas,  las  mas  mujeres  y  niños.  Ale- 
manes no  han  querido  quedar  obligados  á  perder  el  sueldo 
el  dia  que  no  trabajasen :  si  no  se  proveen  de  otra  parte,  no 
perderá  el  enemigo  la  esperanza  de  haber  estos  puertos  que 
tanto  importan,  ni  cesará  la  necesidad  de  enviar  cinco  ó  seis 
mil  hombres  que  desde  el  sitio  nuevo  se  los  defiendan,  que 
lo  podrán  hacer  á  la  segura  no  faltándoles  lo  necesario.  Si 
Dios  fuere  servido  que  la  armada  ,  pareciéndole  que  somos 


S39 

pocos ,  viniese  untes  que  de  aquí  saliese  esta  gente ,  creo  que 
no  volvería  otro  año ,  porque  conocería  la  fortaleza  de  este 
sitio  y  de  los  soldados  de  V.  M.  Cuya  S.  C.  y  R.  persona 
guarde  Nuestro  Señor  y  felicite  como  la  cristiandad  ha  me- 
nester. En  Malta  á  25  de  julio  de  1566.— De  V.  S.  G.  R.  M. 
besa  pies  y  manos  su  humilísimo  vasallo.  —  Saucho  de  Lon- 
doño. 


Copia  do  caria  original  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M^^ 
fecha  en  Mesina  á  2  de  agosto  de  1566.        rí  ^^Ií 

Noticias  de  que  la  armada  turca  ha  llegado  á  Castelnovo — Vuelta 
de  los  tudescos  de  Malta  —  Manda  sacar  la  gente  de  la  Goleta. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  I  loO.y' 
S.  C.  R.  M. 

Habiendo  poco  ha  sabido  que  la  armada  del  turco  ha  en- 
trado en  el  golfo  de  Venecia  y  llegado  á  Castilnovo ,  me  ha 
parecido  suspender  la  ida  de  D.  Alvaro,  aunque  me  hallo  ha- 
berlo escrito  á  V.  M. ,  porque  si  los  turcos  tienen  algún  de- 
signo de  importancia ,  está  claro  que  lo  podrán  poner  con 
mas  dificultad  en  ejecución  estando  la  armada  de  V.  M.  uni- 
da que  dividida,  y  desta  entrada  podría  ser  alterar  á  vene- 
cianos ,  ó  enojarlos  de  manera  que  se  ofreciese  tal  ocasión 
que  fuese  dañoso  no  tener  el  armada  de  V.  M.  junta ,  y  pues 
se  dilata  poco  tiempo  y  se  aventura  á  ganar  tanto,  me  he 
resuelto  en  lo  que  digo. 

Los  tudescos  vinieron  aquí  tres  días  ha  de  Malta  y  con 
poca  salud,  y  por  temor  de  mayor  mal  y  evitar  el  gasto  que 
se  hacia  con  ellos  los  llevaron  hasta  Gaela ,  á  donde  les  han 


510 

lie  despedir  y  pagar  lo  que  han  de  liaber,  y  las  galeras  que 
los  llevaron  serán  aquí  dentro  de  seis  días,  y  en  este  mismo 
tiempo  llegará  D.  Sancho,  al  cual  he  enviado  á  sacar  la 
gente  de  la  Goleta ,  porque  habiendo  lomado  el  armada  el 
camino  que  ha  lomado,  tengo  ya  aquello  por  seguro,  y  tam- 
bién se  ganará  en  ello  que  no  coman  la  victualla  que  hay  en 
aquella  fuerza.  Venidos  aquí,  se  lerna  alguna  mas  noticia  de 
las  acciones  de  la  armada,  y  se  podrá  atender  á  juntar  en  la 
de  V.  M.  la  gente  que  está  en  Malta,  pues  ya  de  aquí  ade- 
lante paresce  que  se  puede  tener  la  mesma  seguridad  que 
de  la  Goleta ;  y  pues  las  ocasiones  me  han  de  guiar  á  lo  que 
se  habrá  de  hacer ,  cuando  se  ofrecieren  iré  dando  cuenta 
á  V.  M.  de  lo  que  en  esta  se  deja  de  decir.  Estas  dos  galeras 
que  lleva  el  prior  eran  de  las  que  habían  de  ir  en  España, 
y  hallándose  en  Genova,  á  donde  las  envié  para  hacer  algu- 
nas provisiones ,  les  he  ordenado  que  le  pasen  hasta  Rosas, 
y  esperen  allí  á  D.  Alvaro  Bazan,  y  el  que  las  lleva  á  cargo 
es  el  comendador  Gil  de  Andrada.  Guarde  Nuestro  Señor  la 
vida  de  V.  M.  por  tan  largos  años  como  sus  criados  y  vasa- 
llos deseamos  y  la  cristiandad  ha  menester.  De  Mesina  á  2 
de  agosto  1566. — Criad©  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales 
pies  y  manos  besa.  — Don  García  de  Toledo. 


S4i 


Copia  de  carta  de  Su  Santidad  á  D.  García  de  Toledo. 
Roma  2  de  agosto  de  1566. 

Le  pide  encarecidamente  que  acuda  con  el  mayor  numero  de 
galeras  posible  á  las  costas  de  Italia  para  destruir  la  armada  del 
turco. 

f  Archivo  del  Excmo.  Sr,  duque  de  Medinasidonia.) 
Pío  Papa  Quinto. 

Amado  hijo  y  noble  varón  salud  y  apostólica  bendición. 
Creemos  que  la  nobleza  vuestra  babrá  ya  entendido  como  la 
armada  del  cruelísimo  tirano  de  los  turcos  ba  entrado  en  el 
seno  Adriático  y  como  ha  llegado  á  los  lugares  de  la  ribera 
de  la  Alemana ;  y  por  tanto  la  república  de  Venecia ,  como 
acostumbra  en  semejantes  tiempos  peligrosos,  ha  declarado 
general  de  su  armada  y  ha  armado  muchas  galeras  demás 
de  Igs  que  tiene  sacadas  para  guardar  de  ordinario  los  luga- 
res de  su  señoría  y  estados,  de  manera  que  por  agora  tienen 
aparejada  armada  de  cerca  de  cien  galeras.  Por  tanto  por  el 
bien  y  salud  de  todos  los  cristianos  en  gran  manera  desea- 
mos (el  cual  vos  con  vuestra  prudencia  fácilmente  también 
podéis  conocer),  deseamos  digo  que  sin  dilación  ninguna, 
juntamente  con  todas  vuestras  galeras,  ó  á  lo  menos  con 
todas  aquellas  que  tenéis  armadas  y  á  punto,  os  partáis  á  la 
vuelta  de  la  ribera  de  la  Apulia  en  el  puerto  de  Brindis,  ó  de 
Otranlo,  ó  en  otro  puerto  de  aquella  región,  ó  si  os  fuese 
cómodo  en  Anconapara  que,  si  alguna  oportuna  ó  buena  oca- 
sión ,  lo  que  Dios  quiera ,  se  ofresciere  para  deshacer  ó  des- 
echar la  armada  del  enemigo,  vos  podáis  eser  presto  y  con 
vuestra  obra  y  virtud  aparejado  para  efectuar  este  negocio. 


342 

Vos,  pues,  hijo  idío,  con  todo  vuestro  ánuno  y  con  todas 
vuestras  fuerzas  tan  presto  como  pudiéredes  con  diligencia 
procurareis  de  poner  esto  que  digo  por  ejecución ,  porque 
liabeis  de  considerar  que  el  bien  tratar  de  este  negocio  con- 
siste principalmente  en  la  ocasión ,  y  por  la  misma  causa  en 
la  celeridad  y  presteza ,  la  cual  si  agora  se  puede ,  ninguna 
de  aquí  adelante  por  cierto  ni  mas  bella  ni  mas  cómoda  opor- 
tunidad podréis  haber  para  perder,  ó  á  lo  menos  reprimir  este 
espantable  y  cruel  enemigo.  Así  que  encarecidamente  os  pe- 
dimos ,  y  en  el  Señor  os  exhortamos,  que  á  este  nuestro  pa- 
rescer  y  consejo  prontamente  y  con  muy  buen  ánimo  que- 
ráis corresponder,  porque  speramos  que  Dios  con  su  favor  y 
ayuda  favorescerá  nuestros  píos  y  buenos  pensamientos  y 
vuestra  prontitud  y  obediencia  contra  los  perfidísimos  ene- 
migos de  la  fé  cristiana.  Dado  en  Roma  á  dos  de  agosto 
de  1566  su6  annulo  piscatoris ,  de  mi  pontificado  el  año 
primero.- — Cassar  Glovierio. 

Al  respaldo  se  lee :  Roma  —  Pió  V —  1566 — Copia  del 
breve  de  S.  S/  para  su  Ex/  hecho  á  ii  de  agosto.  Envióse 
el  original  á  la  corte. 

Copia  de  la  respuesta  que  D.  García  de  Toledo  dio  á  Su 
Santidad.  Mesina  7  de  agosto  de  1566. 

flo.      (Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Santísimo  Padre: 

Hoy  á  mediodía  he  rescibido  el  breve  de  Vuestra  Santi- 
dad con  otras  cartas  de  monseñor  Alejandrino  y  del  comen- 
dador mayor,  y  como  Nuestro  Señor  es  servido  de  nunca  dar 
poco,  cuando  vi  la  elección  de  Vuestra  Santidad,  que  fué  el 
mayor  don  que  la  cristiandad  en  tales  tiempos  podia  resci- 


oio 


bir,  vi  luego  que  lias  este  bien  se  podía  tener  esperanza  de 
otras  grandes  ideas,  y  que  no  solo  habia  de  ser  Vuestra  San- 
tidad remedio  de  las  ánimas  y  reformación  de  la  Santa  Igle- 
sia ,  pero  destrucción  de  los  enemigos  della ;  y  debajo  de  un 
pontífice  tan  sancto  y  un  rey  tan  católico  espero  ver  yo  ma- 
yores sucesos,  de  los  que  Vuestra  Santidad  en  su  breve 
apunta ,  aunque  son  bien  grandes ;  y  por  no  cansar  á  Vues- 
tra Santidad,  ni  darle  fastidio  con  larga  respuesta,  me  remito 
en  ella  á  lo  que  el  comendador  mayor  dirá  á  Vuestra  Santi- 
dad, al  cual  escribo  largo,  para  que  se  ejecute  todo  lo  que 
Vuestra  Santidad  manda  ó  mandare.  He  inviado  á  cobrar 
toda  la  gente  de  los  presidios  de  esta,  lo  cual  espero  será 
toda  aquí  con  toda  la  presteza  que  Vuestra  Santidad  desea, 
y  que  todo  verná  á  juntarse  al  tiempo  que  conviene.  Y  es 
bien  que  entienda  Vuestra  Santidad  que  el  primer  capítulo 
de  mi  instrucción  es  haberme  mandado  S.  M.  que  cualquier 
necesidad  que  Vuestra  Santidad  ó  su  Estado  tuviere ,  que 
para  guardia  ó  defensa  del  acuda  con  las  fuerzas  desla  ar- 
mada para  ampararle  y  defenderle ,  sin  tener  respeto  á  otro 
particular  daño  que  á  los  estados  y  reinos  de  S.  IVI.  pudiese 
venir ,  y  aunque  en  general  tenia  esta  orden  para  defensa 
de  esa  Santa  Sede,  después  de  la  creación  de  V.  Beatitud  ihe 
la  ha  dado  S.  M.  con  mucho  mas  encarescimiento  por  la  aí^f 
cion  particular  que  tiene  á  Vuestra  Santidad ,  la  cual  Nues'p 
tro  Señor,  etc.  ♦'! 

De  Mesina  á  7  de  agosto  de  1566. 

Al  respaldo  se  lee:  Agosto — 1566— Copia  déla  que  se 
scribió  á  Su  Santidad  á  7  de  aí?osto. 


oí  4 

Carla  ov'ujinal  de  San  Pío  V  á  D.  Garda  de  Toledo. 
Roma  5  de  agoslo  de  1566. 

Le  insta  á  que  se  presente  en  las  costas  de  Italia  con  sns  gale- 
ras, donde  la  escuadra  turca  hacia  estragos. 

(Archivo  del  Exorno.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

PlLS  PP.  Y.*  '. 

Dilecte  fili  salutem  et  aplicam.  ben.  Ancorche  hieri  per  un 
nostro  breve  per  corriero  espresso  significassimo  a  V.  Ecc." 
il  desiderio  nostro  circa  la  guardia  della  Puglia ,  et  delle  ma- 
rine e'Otranto  et  Brindisi ,  tuttavia  havemo  voluto  ancora 
su  questo  aviso  venutoci  in  questo  punto,  la  copia  del  quale 
sará  con  questa ,  repplicarle  il  medesimo  ricordandole  a  non 
vi  melter  tempo  in  mezzo  di  presentarsi  a  vista  di  quei  mari, 
scorrendo  la  costa  della  Puglia  sino  in  Ancona  con  l'arma- 
ta  che  si  trova  haver  di  presente,  che  non  duhitano  ch'ella 
con  questo  modo  no'spaventi  la  turquesca  et  faccia  servi- 
zio  grande  a  S.  M.**  Cat.*^^  et  a  tutta  Italia  insieme  avisán- 
dola che  se  ben  credemo  che  i  veneziani  non  sian  per  romper 
adesso  col  turco,  tuttavia  la  presenzia  di  V.  Ecc.^^potreb- 
be  fargli  pigüare  qualche  sorle  di  dcliberazione,  per  esser 
essi  molto  ben  armali  in  mare  sarano  galere  cento  (i),  la 
quale  lassarebbon  forse  andaré  quando  anco  fossero  offesi 
da  loro,  non  ha  vendo  larmata  Gat.*'^  vicina,  sichevipre- 
ghiamo  a  non  perder  quesla  si  bella  ct  honorata  occasionc 

(1)  Las  palabras  de  cursiva  estáo  añadidas  en  el  original  de  dis- 
tinta letra. 


oto 


per  scrviziü  principalincnte  del  sigiior  Dio  et  benefizio  uni- 
versale  de  i  popoli  suoi;  et  rimeltendoci  alia  sua  prudenzza 
quanto  alia  essecuzione  di  quesla  impresa,  le  mandiamo  la 
nostra  benedizione  per  fine  della  presente  che  1  signor  Dio  la 
conservi  et  consoü  di  quanto  desidera.  Di  Roma  a  iij  de 
agosto  1566. 

Sobre. — Dilecto  tíüo  nobili  viro  Garsiaí  a  Toleto,  Sicilia; 
proregi  ac  Catholici  Regis  classis  prgefecto  gnali.,  etc. 

Aviso  venulo  d'Ascoli  del  p.°  d'agosto  1566. 

Aquest'hora  ,  que  sonó  le  cinque  hore  di  nocte,  mi  e  ve- 
nuto  aviso  che  i  armata  d'infideli  ha  dato  in  térra  lonlano  di 
quá  20  miglia ,  et  che  ha  brucialo  Francavilla  con  cinque 
altre  castella  del  Sr.  Duca  d'Atri,  et  che  i  cavalü  turchi 
hanno  gia  trascorso  sin  a  Yillamagna,  luogo  poco  distante 
d'aquesto  territorio,  di  modo  che  no'pure  il  Sr.  Duca  in 
Atri ,  ma  tutli  gli  suoi  di  queslo  contorno  stanno  in  grandis- 
simo  spa vento.  Conforma  questo  presente  avisóla  med."* 
nuova  che  gia  scrissi  a  V.  S.  lllma.  del  num.°de  150  vele. 


...,H 


oiO 


Copia  de  carta  de  D.  Garda  de  Toledo  á  Su  Santidad. 
Mesilla  á  H  de  agosto  de  156ü. 

Contcsla  á  la  anterior. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
Sanctísi.mo  Padre: 

Ayor  á  mediodía  rescibí  un  breve  de  V.  S.^  acompa- 
ñado de  una  carta  de  monseñor  reverendísimo  Alejandro  y 
otra  del  comendador  mayor,  y  porque  dentro  de  seis  horas 
despaché  correo  particular  con  la  respuesta  del  mandato 
de  V.  S.*'  ,  remitiéndome  en  él  á  la  creencia  del  comendador 
mayor,  no  tendré  que  decir  en  cuanto  aquel  despacho  sino 
que  en  este  punto  he  recibido  el  breve  de  V.  S/  de  3  del 
presente ,  enviádome  por  el  visorey  de  Ñapóles,  en  que  me 
manda  en  sustancia  lo  mismo  que  por  el  pasado ,  ansí  que 
Iractando  este  de  la  misma  materia  que  el  primero,  habiendo 
respondido  al  uno  quedan  respondidos  entrambos,  añadiendo 
que  por  infinitas  causas  me  queda  poca  confianza  de  la  es- 
peranza que  venecianos  han  dado  de  juntarse  con  esta  ar- 
mada por  mas  ocasiones  que  el  turco  les  dé,  aunque  me  vean 
á  mí  en  aquellas  costas ,  ni  que  esta  sola  pueda  estorbar  al 
turco  sus  designos ,  en  especial  no  estando  los  enemigos  em- 
peñados sobre  lugar  particular,  que  si  lo  estuviesen,  tenién- 
dole sitiado  y  con  la  artillería  en  tierra,  bien  creo  que  pu- 
diera esta  hacer  algún  fructo;  pero  ella  á  mi  juicio  se  guar- 
dará desta  determinación,  como  se  vée  por  obras,  pues  no 
se  empeña  en  parle  á  donde  pueda  ser  detenida  de  un  dia  ó 
dos  adelante ;  y  también  es  bien  que  sepa  V.  S."*  que  siendo 


547 

ella  de  i 50  velas  y  naNCgando  y  discurriendo  en  la  eosla 
por  donde  yo  tengo  de  ir  con  90  que  no  son  cosas  tan  fáci- 
les de  hacer  que  se  puedan  emprender  con  menor  obligación 
que  el  mándalo  de  V.  S/  ,  con  el  cual  podria  quedar  discul- 
pado si  saliese  de  los  términos  de  la  navegación  y  de  la  razón; 
pero  porque  no  hay  otra  que  tenga  la  fuerza  que  deben 
tener  sus  mandatos,  digo  que  torno  á  afirmar  de  nuevo 
cuanto  sobre  esta  materia  tengo  scripto.  Y  Nuestro  Señor 
la  vida  de  V.  S.**  guarde. 

Al  respaldo  se  lee:  Mesina — 1566 — Copia  de  carta  que 
Su  Ex."  escribió  á  Su  S.d  en  vid  de  agosto  1566.  -i 


Copia  de  caria  original  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.  M., 
fecha  en  Mesina  á  1  de  agosto  de  1566. 

Toma  varias  disposiciones  para  hallarse  preparado  á  combalir 
con  el  turco. 

(Archivo  general  de  Simancas, — Estado,  legajo  núm.  1130.) 
S.  C.  R.  M. 

Con  el  prior  D.  Hernando  escrebí  á  V.  M.  lo  que  man-, 
dará  ver  por  la  copia  que  irá  con  esta ,  y  del  virey  de  Ñapó- 
les será  V.  M.  avisado  de  los  progresos  de  la  armada,  pues 
estando  á  donde  está  podrá  hacerlo  con  mas  brevedad  que 
yo.  He  estado  esperando  estos  dias  á  ver  lo  que  dicha  arma- 
da haria  para  conforme  á  ello  guiar  y  encaminar  la  de  V.  M. 
á  lo  que  mas  conviniese ,  porque  si  se  asentase  en  alguna 
parte  pudiese  con  mas  seguridad  sacar  la  gente  de  Malta  y 
la  Goleta  para  hacerle  en  sus  designos  el  mayor  daño  que 


548 

pudiese,  y  viendo  que  no  tomaba  resolución  firme,  no  he 
osado  en  el  mes  de  junio  y  julio  sacar  la  gente  de  la  Goleta 
ni  de  Malla,  habiéndola  puesto  en  ellas  con  expresas  órdenes 
de  V.  M.  y  entendiendo  que  el  armada  iba  hacia  Ragusa,  y 
que  esta  navegación  era  apartada  deste  reino,  y  de  la  Goleta 
y  Malta,  y  que  también  era  ya  cuasi  á  la  entrada  de  agosto, 
y  que  esto  también  aseguraba  mi  temor ,  creyendo  que  po- 
dria  alterarse  la  amistad  de  venecianos  y  el  turco,  pues  se 
le  entraba  dentro  en  su  golfo,  determiné  de  enviar  á  D.  San- 
cho de  Leiva  por  la  gente  de  la  Goleta,  el  cual  partió  á 
los  29  del  pasado,  habiendo  dado  dos  dias  ha  orden  á  don 
Juan  de  Cardona  que  también  partiese  con  las  galeras  que 
aquí  quedaban  esta  noche  á  sacar  la  gente  de  Malta,  pares- 
ciéndome  que  convenia  tenerlo  todo  junto  para  que  en  caso 
que  sucediese  el  motivo  de  venecianos  ó  necesidad  de  Ragu- 
sa ó  de  otra  parte  se  pudiese  tomar  la  ocasión  que  el  tiempo 
representase,  y  para  este  mismo  tiempo  que  yo  determinaba 
de  sacar  esta  gente ,  di  orden  á  las  galeras  que  están  fuera 
que  se  hallasen  aquí  todas,  y  D.  Sancho  que  es  el  que  mas 
lardará  en  venir  espero  aquí  dentro  de  seis  dias,  y  en  este 
tiempo  llegarán  todas  las  demás.  Estando  poniendo  esto  en 
orden  ha  llegado  hoy  un  correo  de  Roma  con  este  breve  de 
Su  Santidad ,  y  con  esta  carta  del  comendador  mayor.  Res- 
pondo al  uno  y  al  otro  lo  que  V.  M.  mandará  ver  por  las  co- 
pias que  van  con  esta.  Holgara  en  extremo  que  el  tiempo  y 
negocio  sufriera  dar  aviso  á  V.  M.  dello  y  esperar  su  res- 
puesta; pero  no  consintiéndolo  la  ocasión  y  el  tiempo,  he 
sido  forzado  á  escribir  á  Su  Santidad  y  al  comendador  mayor 
lo  que  V.  M.  verá.  Yo  creo  cierto  que  venecianos  serán  mas 
tardíos  en  ejecutar  que  en  hablar,  tanto  mas  no  habiéndolos 
el  turco  hasta  agora  apretado  ni  descontentado  en  cosa  pú- 
blica. Pero  con  lodo  oslo  me  ha  parcscido  que  es  bien  que 


549 

vea  el  papa  y  toila  Italia  que  por  el  armada  de  V.  :VI.  no 
queda. 

El  duque  de  Alcalá  me  ha  escrito  que  pagándolos  yo  se 
podrán  hacer  en  Ñapóles  dos  mil  hombres,  y  que  nombraría 
los  capitanes  para  ello.  Respóndele  que  si  estuvieren  hechos 
cuando  el  conde  de  Altamira  llegare ,  que  creo  que  estará  ya 
allí,  que  los  embarque;  pero  que  si  no  estuviesen  hechos  que 
el  conde  no  se  detenga  por  no  perder  tiempo,  porque  si  ve- 
necianos se  juntan  con  el  armada  de  V.  M.,  bien  seremos 
bastantes  para  todo  sin  esta  gente,  y  si  no  se  junclan  poco 
nos  harán  al  caso  dos  mil  soldados  nuevos  mas  ó  menos.  Es- 
críbole  que  para  en  caso  de  necesidad  mande  dar  la  gente 
que  tiene  en  Pulla  y  cabo  de  Otranto,  porque  yendo  allí  con 
la  armada  de  Y.  M.,  no  la  tomaré  sino  habiéndose  de  pe- 
lear con  los  enemigos,  que  será  si  venecianos  se  junclan  con 
el  armada  de  V.  M.  Escríbeme  también  el  duque  de  Alcalá 
que  no  tomará  los  mil  españoles  que  lleva  el  conde  de  Alta- 
mira,  que  hará  harto  al  caso  para  lo  que  se  hubiere  de  ha- 
cer. También  me  escriben  de  Roma  que  á  los  27  del  pasado 
habia  llegado  el  conde  de  Altamira  con  la  gente  de  Césaro 
de  Ñapóles  en  la  Especie,  y  que  habia  tomado  cuatro  galeo- 
tas, y  otra  sabia  yo  que  habia  tomado  yendo  á  la  Goleta  cer- 
ca de  la  Faviñana.  Enviaré  á  V.  M.  con  el  primero  una  me- 
moria de  todos  los  navios  de  remo  que  se  han  tomado,  que 
creo  que  pasan  de  veinte  y  ocho.  Si  este  negocio  de  vene- 
cianos tuviere  fundamento,  escribo  al  comendador  mayor 
que  haga  pasar  este  correo  con  diligencia  para  dar  aviso  á 
V.  M.  de  todo ,  y  sino  que  con  la  primera  ocasión  que  hu- 
biere envíe  este  despacho.  Y  por  no  ocurrirme  al  presente 
otra  cosa  de  que  dar  aviso  á  V.  M.,  no  me  alargaré  mas  en 
esta.  Cuya  vida  Nuestro  Señor  guarde  muy  largos  años  como 
la  cristiandad  ha  menester.  De  Mesina  á  7  de  agosto  i 566.— 


550 

Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. 
— Don  García  de  Toledo. 


Carta  original  de  D.  Sancho  de  Leiva  á  S.  M.,  fecha  en 
Palermo  á  8  de  agosto  1 566 

Le  entera  de  una  entrevista  que  tuvo  con  el  rey  de  Túnez ,  y  de 
la  necesidad  de  renovar  con  él  las  treguas.  —  Disgusto  de  la  gente 
de  la  Goleta. — Presente  de  cuatro  caballos  árabes,  hecho  por  aquel 
príncipe  á  Felipe  2." 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  iiZOJ 

S.  C.  R.  M. 

Por  orden  de  D.  García  de  Toledo  (que  á  los  50  del  pa- 
sado me  dio)  fui  á  la  Goleta  á  sacar  de  allí  la  gente  del  ter- 
cio de  Ñapóles.  Llegué  allí  á  los  4 ,  y  el  dia  siguiente  estan- 
do embarcando  la  gente  llegó  allí  un  secretario  del  rey  de 
Túnez ,  con  el  cual  me  escribió  una  carta  en  creencia  del  di- 
cho secretario,  el  cual  me  dijo  de  parte  del  rey  que  las  ve- 
ces que  yo  habia  ido  este  verano  á  la  Goleta  me  habia  siem- 
pre enviado  á  visitar,  y  la  última  vez  con  gran  encaresci- 
miento  me  habia  pedido  que  yo  me  quisiese  ver  con  él ,  por- 
que deseaba  tratar  conmigo  cosas  que  mucho  importaban  al 
servicio  de  V.  M. ,  y  que  habiéndome  yo  excusado  se  habia 
resolvido  de  escrebir  una  carta  á  V.  M.  y  fiarla  de  mí,  y 
que  aunque  habia  ya  tantos  dias  no  habia  habido  respuesta, 
la  cual  él  habia  esperado  con  mucho  deseo ,  y  porque  ahora 
era  mayor  la  necesidad  que  tenia  de  verse  conmigo ,  y  im- 
portaba mas  que  nunca  al  servicio  de  V.  M.,  que  me  pedia 
cuan  encarescidamenle  podía  me  dispusiese  á  verme  con  él, 


351 

y  que  cuando  por  él  no  lo  quisiese  hacer,  lo  hiciese  por  lo 
mucho  que  importaba  al  servicio  de  V.  M.,  y  que  cuanto  á 

mi  seguridad  que  viniese  sobre  su  palabra,  que  por  ella  me 
aseguraba  del  y  de  los  suyos,  y  de  turcos  y  alarbes,  y  de 
todo  el  mundo,  y  que  porque  yo  no  tomase  tanto  trabajo, 
ni  gastase  mucho  tiempo ,  que  él  se  vernía  la  vuelta  de  Car- 
t^go  á  un  jardin  que  allí  tiene ,  y  allí  nos  venamos  y  habla- 
riamos  largo.  Yo  viendo  la  necesidad  en  que  la  Goleta  está 
(la  cual  diré  adelante)  y  lo  que  decia  el  rey  que  importaba 
al  servicio  de  V.  M.,  y  que  en  ir  yo  no  se  aventuraba  sino 
mi  persona,  habiéndolo  comunicado  con  D.  Alonso  Pimen- 
tel  y  con  el  maestre  de  campo  Carrillo  de  Quesada,  determi- 
né de  ir,  y  ansí  el  martes  6  del  presente  habiendo  dejado  á 
don  Diego  Alvarez  Osorio ,  mi  sobrino ,  en  las  galeras  en  mi 
lugar  y  con  la  orden  de  lo  que  habia  de  hacer  si  á  mí  algo 
me  acaeciese  (  lo  que  nunca  temí)  fui  á  verme  con  el  rey  sin 
gente  ni  soldados,  llevando  conmigo  al  maestre  de  campo 
Carrillo ,  y  á  los  capitanes  don  Francisco  Zapata ,  Montes 
Doca,  y  Medinilla  y  otros  gentiles  hombres.  Hallé  al  rey  en 
su  jardin,  y  con  él  hasta  mil  y  doscientos  de  acaballo,  los 
mas  dellos  arcabuceros.  No  podría  encarescer  á  V.  M.  el 
contentamiento  que  mostró  que  habia  rescibido ,  y  las  gra- 
cias que  me  dio  de  haber  venido  y  fiado  de  su  palabra,  dan- 
do gracias  á  Dios  que  habia  llegado  un  dia  en  el  cual  él  pu- 
diese hablar  con  criado  de  V.  M.  todo  lo  que  deseaba,  y 
después  de  haber  hablado  un  rato  delante  de  los  suyos  y  de 
los  que  conmigo  iban ,  mandó  que  se  saliesen  todos  que  que- 
ría hablar  solo  conmigo,  y  así  quedamos  con  él  tres  de  su 
consejo  y  la  lengua  suya  y  yo.  El  habló  conmigo  bien  dos 
horas  y  media,  y  por  cierto  á  mi  parescer  prudente  y  aun 
modestamente  según  era  la  materia ,  porque  fueron  muchas 
las  cosas  que  me  dijo  y  contó  de  los  tiempos  pasados  y  pre- 


552 

seiilcs  on  disculpas  suyas,  diciendo  quien  tenia  algunas,  lo 
cual  era  con  la  modestia  que  digo ,  y  diciendo  que  no  que- 
ría decir  mal  de  nadie  sino  lo  que  no  podia  excusar  para  su 
desculpa,  y  si  todas  las  hubiese  de  decir  seria  esta  carta  de- 
masiado larga ,  por  esto  diré  la  sustancia  que  se  resuelve  en 
dos  cosas. 

La  primera  y  mas  principal  es  suplicar  á  V.  M.,  y  esto 
con  grandísimo  encarescimiento ,  que  sea  servido  de  asentar 
con  ól  una  paz  perpetua ,  una  tregua  larga  tal ,  que  él  pue- 
da tener  seguridad  de  que  la  tiene,  y  á  V.  M.  por  su  ampa- 
ro y  en  su  favor ,  que  cuando  él  esta  tenga ,  él  mostrará  á 
V.  M.  su  lealtad  y  su  verdad,  y  el  conoscimiento  que  tiene 
de  que  S.  M.  Cesárea  le  dio  aquel  reino  y  V.  M.  se  lo  ha 
conservado  y  conserva ,  y  que  con  su  favor  ni  temerá ,  ni 
estimará  á  nadie  sino  á  solo  V.  M. ;  pero  que  estando  de  la 
manera  que  hasta  aquí  y  á  la  disposición  y  voluntad  de  los 
ministros  que  cuando  quieren  paz  ó  guerra  se  la  iiacen  ,  y 
él  no  tiene  tanta  parte  que  pueda  saber  si  es  aquello  volun- 
tad de  V.  M.  ó  no ,  ni  licencia  para  enviallo  á  saber ,  ni  de- 
cir su  razón  ,  ni  dar  disculpa  ,  ni  escrebir  seguramente  una 
carta,  y  ansí  V.  M.  no  sabe  mas  de  lo  que  el  que  en  la  Go- 
leta está  le  quiere  decir,  no  puede  tener  contentamiento  ni  se- 
guridad, ni  sabe  que  se  hacer,  y  aunque  no  me  dijo  lo  que 
ahora  diré  por  palabras  formales,  diómelo  á  entender  y  de- 
clarar lo  mas  los  suyos ,  que  viéndose  en  tanto  peligro,  ni 
osaba  romper  con  los  turcos,  ni  desasirse  dellos,  porque  si 
cuando  lo  haga  los  ministros  de  V.  M.  que  es  su  amparo, 
le  rompen  la  tregua,  brevemente  es  perdido,  pues  sus  fuer- 
zas no  bastan  á  defenderse  de  tan  grandes  poderes ,  ni  del 
uno  sin  el  favor  del  otro,  por  esto  él  desea  tener  de  V.  M. 
esta  seguridad  por  medio  de  una  paz  perpetua  ó  de  una  lar- 
ga tregua. 


^'Lo  segundo  es  que  él  desea  y  suplica  á  V.  M.  sea  ser- 
vido de  mandar  ahora  enviar  á  la  Goleta  una  ó  dos  personas 
importantes  y  de  calidad,  tales  como  de  mano  de  V.  M.,  las 
cuales  vean  y  sepan  las  cosas  pasadas  y  presentes,  y  las  que 
él  ha  hecho  y  las  que  se  han  hecho  con  él ,  y  las  ocasiones 
que  le  han  dado  y  tratamiento  que  le  han  hecho,  y  lo  que 
ha  sufrido,  y  de  todo  informe  á  V.  M.  que  será  juez,  y  le 
den  orden  y  libertad  como  pueda  escrebir  á  V.  M.  y  enviar 
sus  embajadores  cuando  convenga ,  porque  ahora  ni  la  tiene 
ni  la  tenido  muchos  años  ha,  por  lo  cual  se  han  hecho  mu- 
chas cosas  que  se  pudieran  excusar  y  dejado  de  hacer  otras 
muchas  que  convinieran ,  y  que  esta  tal  persona  ó  personas 
que  vernán,  podrán  tratar  la  paz  ó  tregua  que  V.  M.  será 
servido  de  asentar.  Esta  es  la  sustancia  de  lo  que  me  dijo, 
y  me  encargué  de  hacello  saber  á  V.  M. 

La  principal  cosa  que  me  hizo  mover  á  verme  con  el  rey 
fué  ver  la  Goleta  en  peor  estado  del  que  yo  quisiera  ni  con- 
vernía.  La  tregua  se  cumple  á  los  18  deste,  y  no  veo  tratar 
de  otra,  ni  tan  buena  inteligencia  ni  satisfacción  entre  el  rey 
y  D.  Alonso  Pimentel,  que  se  pueda  esperar  que  las  cosas 
se  pongan  en  ninguna  buena  razón ,  mas  las  veo  aparejadas 
á  rompimiento  que  á  conformidad.  No  sé  si  convernía  en  este 
tiempo;  pero  por  mi  parescer  no  solo  no  convernía,  pero  por 
no  romper  se  debe  sufrir  cualquier  cosa  por  pesada  que  sea 
hasta  que  V.  M.  provea,  porque  si  rompen  yo  juzgo  que 
aquella  plaza  se  pone  en  notable  peligro.  La  causa  diré  aquí 
por  mi  descargo,  pues  lo  he  visto,  y  por  lo  que  debo  al  ser- 
vicio de  V.  M.  La  gente  de  la  Goleta  no  solo  está  descon- 
tenta, pero  desesperados  los  masdellos,  y  de  tal  manera,  que 
si  los  moros  los  acogiesen  se  irian  á  ellos  la  mayor  parte. 
Las  causas  que  dan  son  muchas,  pero  dos  las  principales; 
la  una  es  lo  mucho  que  se  les  debe,  y  esta  es  la  menor.  La 
Tomo  XXX.  23 


554 

ütra  y  mayor  es  que  se  ven  allí  presos  de  tal  manera ,  que 
ninguno  sabe  cuando  ha  de  salir,  porque  hay  hombres  de 
seis  años,  de  diez ,  de  quince  y  de  veinte  que  están  allí  y  no 
los  dejan  salir ,  y  de  esto  nace  su  descontento  y  desespera- 
ción ,  la  cual  es  ahora  mayor  que  nunca  fue ,  porque  en  mi 
presencia  he  visto  dos  cosas  que  rae  han  hecho  temer  mu- 
cho ;  la  una  es  que  en  los  dos  ó  tres  dias  que  allí  estuve  se 
huyeron  mas  de  ciento  y  veinte  soldados  y  se  fueron  á  la 
campaña ,  y  si  no  fuera  por  dos  cosas ,  creo  que  se  fueran 
mas  de  quinientos.  La  una  es  porque  no  solo  el  rey  de  Túnez 
no  los  recibe ,  pero  los  vuelve  si  algunos  se  van  á  él ,  y  en 
estos  dias  atrás  se  fueron  dos,  y  á  los  alarbes,  y  dellos  los 
hubo,  y  no  embargante  que  decian  que  se  hablan  ido  á  tor- 
nar moros  los  invío  á  D.  Alonso,  el  cual  hizo  justicia  dellos. 
Y  V.  M.  sea  cierto  que  el  dia  que  se  rompa  guerra  y  que  se- 
pan que  el  rey  los  rescibirá  que  se  le  pasará  la  mitad  de  la 
gente,  y  que  él  lo  sabe  y  tiene  muy  bien  entendido,  pues 
cuando  él  no  solo  los  asegure ,  pero  les  prometa  sueldo  y 
dádivas  y  pasaje  que  lo  sabrá  bien  hacer,  considere  V.  M. 
los  que  se  le  pasarán  y  en  cuanto  peligro  dejarán  la  fuerza. 
Lo  otro  es  que  yo  usé  gran  diligencia  en  no  recebir  ninguno 
en  las  galeras,  y  en  entregar  á  D.  Alonso  todos  los  que  á 
ellas  venian ,  pero  con  condición  que  los  perdonase ,  y  ansí 
por  no  castigar  á  tantos  y  por  no  perdellos  los  perdonó  y  vol- 
vieron todos  que  no  le  faltaron  mas  de  once,  los  cuales  es- 
peraba hallar. 

Lo  otro  que  acaesció  fué  que  un  soldado ,  dicen  que  era 
portugués,  trataba  un  motin  que  lo  tenia  tan  adelante,  que 
dice  D.  Alonso  que  no  esperaban  sino  que  las  galeras  se  fue- 
sen. Fué  D.  Alonso  avisado  desto  la  mesma  noche  que  yo 
allí  llegué ,  y  á  la  mañana  amáneselo  ahorcado.  Tenían  de- 
terminado matar  á  D.  Alonso  yá  los  capitanes,  y  si  esto  ha- 


555 

cian,  vea  V.  M.  como  se  pudieran  fiar  para  acordarse.  Yo  no 
creo  que  se  acordaran  con  otro  que  con  el  rey  de  Túnez ,  el 
cual  es  sagaz  y  tiene  mas  inteligencia  en  la  Goleta  de  lo  que 
muestra.  Yo  suplico  á  V.  M.  cuanto  puedo  que  mande  mirar 
mucho  en  esto  y  proveerlo  con  la  mayor  brevedad  que  sea 
posible,  para  asegurarlo  antes  que  acaezca  algún  caso  inre- 
parable.  Con  lo  que  á  mí  me  paresce  que  esto  quedarla  re- 
mediado ,  seria  con  inviar  de  Sicilia  ó  de  Ñapóles  dos  ó  tres 
compañías  y  sacar  de  la  Goleta  otra  tanta  gente  de  los  mas 
viejos,  ó  á  lo  menos  docientos  soldados ,  y  á  estos  pagarles  lo 
que  se  les  debe,  que  con  ver  esto  los  otros  y  con  dalles  espe- 
ranza que  sacarán  presto  otros,  se  contentaran  y  asegurarán 
todos.  Esto  mesmo  diré  á  D.  García  de  Toledo  y  escribiré  al 
duque  de  Alcalá,  que  si  V.  M.  se  lo  remite  podrá  quedar  des- 
cansado por  el  cuidado  y  diligencia  con  que  siempre  provee 
todas  las  cosas  que  al  servicio  de  V.  M.  convienen ,  y  tiene 
tanto  crédito  y  opinión  con  todos  los  soldados  y  con  todo  el 
mundo  que  si  él  les  envía  á  decir  que  los  sacará,  ó  pagará, 
ó  hará  otra  cosa  por  ellos,  bastará  mas  y  lo  creerán  mas  que 
si  olro  lo  hiciese  con  las  obras. 

Después  que  el  rey  de  Túnez  acabó  de  hablar  conmigo 
en  los  negocios ,  me  dijo  que  muchas  veces  ha  deseado  en- 
viar caballos  á  V.  M.  y  por  no  tener  modo  cómo  ni  por  dón- 
de lo  ha  dejado,  y  que  ahora  se  hallaba  con  solos  cuatro  que 
le  páresela  que  se  atreverla  á  inviar  á  V.  M.  si  yo  los  qui- 
siese traer.  Yo  le  dije  que  si  traerla  y  los  enviarla  ó  llevaria 
á  V.  M.  Díjome  que  si  pensara  tener  tal  ocasión  que  tuviera 
muchos  mas,  pero  que  por  no  perdella  quería  enviar  estos 
cuatro,  y  que  él  daria  para  el  gaslo  dellos  lo  que  fuese  me- 
nester. Yo  le  dije  que  ni  para  los  caballos  ni  para  los  que  él 
quisiese  enviar  con  ellos  no  era  menester  nada ,  que  yo  lo 
proveerla.  Díjome  que  él  no  quería  enviar  á  nadie,  que  á  mí 


550 

solo  hacia  su  embajador  y  solicitador ,  y  á  mí  me  lo  enco- 
mendaba y  remilia  lodo.  Pidióme  que  fuese  buen  tercero  con 
V.  M.,  que  solo  un  moro  inviaba  comigo  para  que  le  vol- 
viese la  respuesta  de  V.  M.  derecha  á  sus  manos,  porque  no 
pasase  por  otras.  Dióme  cuatro  caballos  para  V.  M.,  los  dos 
dellos  ensillados  y  enfrenados  á  la  ginela  á  su  usanza  muy 
bien,  los  otros  dos  en  pelo.  Uno  de  los  caballos  es  castaño, 
de  buen  tamaño,  y  muy  bien  hecho,  y  bien  puesto  caballo, 
alegre,  pero  tiene  los  pies  y  las  manos  blancas ,  todo  lo  de- 
más paresce  muy  bueno.  Otro  es  rucio,  gentil  caballo,  buen 
tamaño,  buenos  pies  y  manos,  y  bueno  todo  junto.  De  los 
otros  dos  el  uno  es  blanco ,  paresce  de  poco  costado  y  poca 
barriga ;  si  la  hinche  será  lindo  caballo ,  pero  no  tampoco 
mucho.  El  cuarto  al  parescer  es  ruin  caballo,  es  mas  peque- 
ño que  los  otros  y  triste,  de  color  tordillo,  y  antes  que  los  em- 
barcase le  vi  una  rodilla  de  una  mano  algo  hinchada ,  creo 
que  sea  esparaván,  alo  menos  cosa  vieja.  Yo  lo  mostré  lue- 
go á  la  lengua  del  rey  y  á  otros  moros  que  conmigo  estaban . 
Yo  traigo  los  cuatro  caballos,  y  terne  dellos  y  del  moro  mu- 
cho cuidado  y  de  llevallos  ó  enviallos  lo  mas  brevemente  que 
8erá  posible.  Suplico  á  V.  M.  sea  servido  mandarme  avisar 
del  recibo  desta  y  de  lo  que  manda  proveer ,  y  que  yo  res- 
ponda al  rey  de  Túnez. 

Con  esta  envío  unas  cartas  que  el  ingeniero  Fratin  me 
dio  para  Y.  M.  Él  está  descontentísimo  y  desea  que  V.  M. 
le  mande  servir  en  otra  parte ,  aunque  sea  con  doblados  tra- 
bajos y  menor  sueldo,  y  pidióme  que  así  yo  lo  escribiese 
á  Y.  M.  y  se  lo  suplicase  de  su  parte;  y  pues  él  lo  escribirá 
mas  largo  y  el  estado  en  que  está  la  obra,  no  lo  diré  yo. 

A  los  28  de  junio  escrebí  á  Y.  M.  y  le  hice  saber  que 
D.  García  de  Toledo  me  habia  ordenado  que  fuese  á  la  Go- 
leta á  llevar  allí  otras  cinco  compañías  del  tercio  de  Ñapóles 


357 

que  habían  quedado,  y  á  otras  cosas:  después  de  ido  el  des- 
pacho y  de  haber  yo  despalmado  liis  galeras,  mudó  la  orden, 
que  le  debió  parescer  que  ni  yo  ni  oíros  dos  capitanes  gene- 
rales de  V.  M.  que  en  Mesina  estábamos,  eramos  bastantes 
para  tal  servicio ,  y  así  escogió  al  conde  de  Altamira ,  y  por 
su  coadjutor  á  D.  Juan  Zanoguera  ,  para  que  con  20  galeras 
fuese  á  aquel  servicio  y  á  otros  como  V.  M.  se  podrá  man- 
dar informar ,  y  á  mí. que  fuese  á  bajar  las  seis  galeras  del 
Citraro ,  las  cuales  varé  y  traje  á  Mesina  para  vararlas  allí 
donde  medrarán  poco ,  porque  no  estando  hecho  el  tarazanal 
ni  los  magacenes  para  las  municiones  de  las  galeras  es  per- 
dellas  y  cuanto  en  ellas  se  gasta.  Todas  las  cosas  quieren 
ser  cumplidas  y  concertadas,  de  manera  que  no  falte  nada, 
que  si  falla  una  destempla  todas  las  otras ,  pues  que  hará 
donde  faltan  muchas  como  á  las  galeras  que  se  varan  en 
Mesina  que  los  bucos  están  al  aire,  al  agua,  al  sol,  y  no 
hay  cosa  que  mas  los  gaste  que  varallos  muchas  veces.  Las 
municiones  y  aparejos  de  las  dichas  galeras  no  tienen  auii 
sus  magacenes,  ni  donde  estén  señaladas  y  apartadas  y  bien 
acondicionadas  cada  una  por  sí  como  debria  estar.  Cuando 
el  tarazanal  y  magacenes  estén  hechos,  juzgaría  yo  que  seria 
bueno  tener  galeras  de  respecto  con  lodos  sus  aparejos ,  y 
que  se  hiciesen  allí  por  no  varallas  tantas  veces,  porque  se 
podrá  tener  ordenadamente  y  conservado  como  se  tiene  en 
otras  partes;  y  digo  á  V.  M.  que  lo  que  ansí  no  se  tiene  sa 
gasta  y  consume  mas  que  si  sirviese. 

A  los  22  de  junio  di  cuenta  á  V.  M.  de  lo  que  D.  García 
de  Toledo  había  usado  comigo  en  lo  de  los  esclavos.  Suplico 
á  V.  M.  se  acuerde  de  mandar  proveer  en  ello.  Cuya  S.  C. 
y  R .  persona  Nuestro  Señor  guarde  con  aumento  de  mas 
reinos  y  señoríos  como  los  criados  y  vasallos  de  V.  M.  de- 
seamos. De  Palormo  á  8  de  agosto  Í566.— S.  C.  R.  M. 


558 

hiimil  criado  y  vasallo  Je  V.  M.  que  sus  reales  manos  besa. — 
Don  Sancho  Ruiz  de  Leiva. 

Sobre  de  la  caria.  — A  la  S.  G.  R.  M.  el  rey  nuestro 
señor ,  etc. 


Carla  original  de  D.  Sancho  de  Leiva  al  Ule.  señor  Fran- 
cisco de  Eraso ,  fecha  en  Palermo  á  9  de  agosto  de  156ü. 

Le  dice  el  mal  estado  en  que  se  halla  la  Goleta  por  el  disgusto 
de  la  guarnición  y  por  acaharse  la  tregua  con  el  rey  de  Túnez. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado ,  legajo 
núm.  1130.J 

Ilustre  Señor  : 

El  Sr.  D.  García  por  hallarse  sin  gente  para  el  armada, 
paresciéndole  cosa  muy  conveniente  y  nescesaria  ir  con  ella 
la  vuelta  de  Brindis  para  estar  allí  á  ver  lo  que  hace  la  del 
turco ,  que  por  mi  opinión  fuera  mejor  haberlo  hecho  dos 
meses  ha ,  me  envió  á  los  30  del  pasado  á  la  Goleta  á  sacar 
la  gente  del  tercio  de  Ñapóles  que  allí  estaba  para  llcvalla 
en  el  armada.  Llegué  á  la  Goleta  á  los  4  del  presente.  Lo 
que  allí  hay ,  y  el  trabajo  y  peligro  en  que  aquella  fuerza 
queda,  ansí  por  el  descontento  de  la  gente,  que  es  el  mayor 
del  mundo ,  como  por  acabarse  la  tregua  á  los  8  deste ,  es- 
cribo largo  á  S.  M.  como  V.  m.  verá,  por  lo  cual  no  lo  diré 
aquí.  Solo  digo  que  el  negocio  es  de  manera  que  yo  tengo 
aquello  por  muy  peligroso  si  S.  M.  no  lo  manda  remediar 
brevemente.  Este  peligro  fué  causa  que  yo  me  aventurase  á 
verme  con  el  rey  de  Túnez  por  dejalle  con  alguna  buena  es- 
peranza que  bastase  á  cntretencllc  mientras  S.  M.  provee. 


359 

Al  Sr.  D.  García  diré  esla  necesidad  en  llegando  en  Mesina, 
y  al  señor  duque  de  Alcalá  lo  escribo  de  aquí ,  y  si  á  él  es- 
tuviese remitido,  yo  aseguro  que  presto  pornía  remedio  como 
lo  pone  en  todo  lo  que  le  toca.  De  acá  no  hay  otra  cosa 
que  hacer  saber  á  v.  m.  mas  de  rogar  á  Nuestro  Señor  guar- 
de la  Ule.  persona  de  v.  m.  y  estado  acresciente  como  desea. 
DePalermo  á  9de  agosto  de  1566. — Besa  las  manos  de  v.  m. 
su  servidor,  — Don  Sancho  Ruiz  de  Leiva. 

Sobre  de  la  carta. — Al  Ule.  señor  mi  señor  Franciseo- 
de^'Eraso ,  del  Consejo  de  S.  M.  y  su  secretario. 


Carla  original  de  Felipa  2.^  á  D.  Garda  de  Toledo.  Del 
Bosque  de  Segovia  á  ii  de  agosto  de  1566. 

Aprueba  que  haya  enviado  á  Malta  gente  y  provisiones,  y  á  don 
Juan  Zanoguera  á  reconocer  la  armada  del  turco —Actividad  en 
la  fortificación  de  la  Goleta  — Construcción  de  buques — Esclavos — 
Que  está  muy  satisfecho  de  sus  servicios ,  y  que  cuanto  le  escribie- 
ren en  contra  de  sus  cosas,  no  podrá  dañarle  —  Jorge  Grimaldo— 
Cañones — Cuentas — El  contador  Orozco — Licénciamiento  de  dos 
mil  soldados. 


(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
El  Rey. 


Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Sicilia :  Vi  vuestras  cartas  de  veinte  y  cua- 
tro y  veinte  y  cinco  de  mayo ,  cuatro  y  veinte  y  ocho  de  ju- 
nio y  dos  del  pasado,  y  la  relación  que  con  las  últimas  en- 
viastes  de  lo  que  D.  Juan  Zanoguera  reñiió  de  la  armada  del 
turco ,  que  por  satisfaceros  de  lo  mas  cierto  fué  bien  en  en- 


360 

viarle  á  que  la  viese  y  reconociese ,  y  como  quiera  que  de- 
más deslo  y  de  lo  que  scribió  el  maestre  podríades  haber  te- 
nido aviso  que  los  bajeles  de  Trípol  han  salido  de  aquel  puer- 
to,  y  con  razón  se  debia  sospechar  que  iban  á  juntarse  con 
ella,  todavía  no  habiendo  hecho  mas  demostración  hasta  los 
veinte  y  cinco  de  junio  y  saberse  que  no  traia  navios  redon- 
dos con  artillería  y  municiones  y  la  gente  ser  tan  poca ,  te- 
nemos por  cierto  que  este  año  no  emprenderá  cosa  de  sus- 
tancia, sino  que  solamente  atenderá  ala  guardado  sus  tier- 
ras y  á  que  nuestra  armada  no  pueda  hacer  en  ellas  daño,  y 
así  aunque  primero  érades  de  opinión  que  no  podría  excusar 
el  meter  la  gente  en  Malta  por  las  causas  que  habéis  escrip- 
to,  no  pudo  dejar  de  ser  útil  y  provechoso  poner  en  ella  los 
cinco  mili  spañoles  y  tres  mili  tudescos  que  apuntáis  sin  es- 
perar á  la  gente  del  papa ,  'pues  habiéndola  deshecho  y  no 
estando  levantada  no  pudiera  llegar  á  tiempo  como  lo  scri- 
bistes  al  comendador  mayor  de  Castilla ,  así  por  detener  al 
gran  maestre  y  al  convento  de  la  religión,  y  que  atendiesen 
como  lo  hacen  á  la  fortificación  del  monte  de  Sanet  Elmo, 
como  por  si  esto  no  se  hiciera  pudiera  ser  que  teniendo  avi- 
so la  dicha  armada  que  se  desamparaba  la  dicha  isla  vinie- 
ran sobrella ;  y  agradézcoos  el  cuidado  que  de  esto  tuvisteis 
y  de  proveerla  de  vituallas  por  el  tiempo  que  escribís ,  en- 
cargándoos de  nuevo  que  en  todo  caso ,  si  no  lo  hubiéredes 
hecho ,  enviéis  el  dinero  necesario  para  pagar  la  infantería 
alemana  y  spañola  y  lo  que  falta  de  los  treinta  mili  ducados 
que  dimos  para  la  fortificación ,  pues  sabéis  cuanto  importa 
que  aquello  se  acabe  estando  en  tan  buen  estado ,  y  demás 
de  esto  procurareis  de  enviar  todos  los  gastadores  que  se 
pudieren  haber  y  juntar;  y  entretener  allí  las  galeras  que  pide 
el  maestre  para  que  ayuden  á  esto,  parécenos  que  se  debe 
excusar  por  las  mismas  causas  que  vos  escribís ,  y  sobre  todo 


561 

os  fuego  y  encargo  que  en  dando  las  cosas  lugar  á  ello  uséis 
de  toda  diligencia  en  sacar  la  gente  de  aquella  plaza  y  de  la 
Goleta,  aunque  de  nuevo  hayáis  enviado  á  ella  las  cinco  com- 
pañías del  tercio  de  Ñapóles  que  faltaban ,  que  por  cierto  ten- 
go que  cuando  este  despacho  llegare ,  ya  estaréis  certificado 
de  lo  que  la  dicha  armada  quiere  hacer  y  que  lo  podréis  efec- 
tuar sin  perder  tiempo ,  lo  cual  haréis  siguiendo  la  orden  que 
en  la  carta  que  va  con  esta  se  os  dice. 

Y  en  lo  de  las  vituallas  que  sobraren  en  Malta,  daréis  or- 
den que  se  pongan  todas  á  buen  recaudo,  ó  tornándolas  á  sa- 
car, ó  tratando  con  el  maestre  que  las  compre  para  tener  de 
respecto,  ó  tomando  el  mejor  expidiente  que  pudiésedes, 
que  en  cuanto  á  las  que  quedaren  de  las  que  se  han  envia- 
do á  la  Goleta  no  hay  que  decir  sino  que  estarán  bien  allá 
para  provisión  de  la  gente  ordinaria  y  se  les  darán  en  cuenta 
de  su  sueldo. 

La  traza  que  desla  plaza  nos  enviastes,  hecha  por  el  Fra- 
lin,  he  visto  juntamente  con  su  relación  y  holgado  mucho 
de  entender  la  prisa  que  se  ha  dado  en  el  repararla  y  fortifi- 
carla para  esta  presente  necesidad ,  con  fin  de  que  sirva  lo 
que  agora  se  hace  para  la  obra  perpetua  ,  y  acá  se  ha  mirado 
y  comunicado  sobrello ,  y  ha  parecido  de  advertir  algunas 
cosas  que  ocurre  sobre  que  se  escribe  á  D.  Alonso  Pimentel 
y  al  dicho  Fratin. 

Y  pues  la  armada  del  turco  da  lugar  á  ello,  y  lo  que  im- 
porta ponella  en  defensa  para  el  año  que  viene ,  os  encargo 
mucho  tengáis  muy  particular  y  special  cuidado  de  dar  prisa 
á  que  se  continúe  y  acabe,  proveyendo  que  se  envíe  dése  rei- 
no todo  lo  que  los  dias  pasados  se  os  scribió  para  que  se  pro- 
veyese dinero,  y  dando  prisa  á  los  otros  ministros  de  que  te- 
neis  allá  razón  para  que  también  envíen  lo  que  á  cada  uno 
toca,  que  yo  he  mandado  que  de  aquí  se  provea  mas  cantidad 


de  dinero  para  que  no  cese  la  fábrica  y  se  trabajara  y  vaya 
con  toda  brevedad  enviando  número  de  gastadores  y  mura- 
dores,  y  no  pudiéndose  hallar  al  sueldo  los  enviareis  por 
mandamiento,  y  de  lo  uno  y  de  lo  otro  sea  el  que  os  parecie- 
re para  que  la  obra  se  acabe  antes  que  el  año  que  viene 
venga  la  necesidad ,  que  el  dinero  para  ello  se  enviará  de 
acá,  y  os  encargo  mucho  tengáis  gran  cuenta  de  la  fortifica- 
ción y  de  darme  continuo  aviso  de  lo  que  se  hiciere. 

En  lo  que  toca  á  los  quince  buques  que  por  cuenta  dése 
reino  scribimos  se  hiciesen  en  Ñapóles  proveyendo  vos  el  di- 
nero, nos  ha  scripto  el  virey^que  si  se  lo  enviáis  dará  orden 
que  se  hagan ,  y  aunque  habiendo  los  que  hay  hechos  en 
Genova  y  Ñápeles,  que  son  diez  y  seis  y  veinte  y  uno  en  Bar- 
celona, que  se  acabarán  en  fin  desle  verano,  scribe  el  du- 
que de  Francavila  parece  que  por  el  presente  bastan  estos, 
y  que  cuando  haya  mas  comodidad  se  pueden  hacer  los 
otros.  Si  todavía  viéredes  que  son  menester,  aunque  decís 
que  no  tenéis  forma  para  ello,  mirareis  allá  lo  que  se  podrá 
hacer ,  que  de  acá  no  la  hay  de  enviar  esta  provisión  con  los 
gastos  que  se  ofrecen. 

He  visto  lo  que  decís  en  lo  de  los  sclavos  que  tomasteis 
en  Cerdeña  y  hicistes  entregar  á  nuestros  oficiales  desas  ga- 
leras ,  y  porque  acá  no  se  sabe  en  cuyo  poder  estaban,  ni  de 
qué  dinero  se  compraron  ni  proceden ,  ni  á  qué  personas  se 
ha  de  hacer  dellos  el  descargo  que  escribís ,  avisarnos  heis 
mas  particularmente  desto,  ó  enviareis  ordenados  los  despa- 
chos que  os  pareciere  son  necesarios ,  que  yo  los  mandaré 
ver  y  proveer  lo  que  convenga. 

En  lo  que  toca  á  los  oficios  de  proveedor  general  y  con- 
tador, aunque  tengo  entendido  la  necesidad  que  hay  dellos, 
querríalo  hacer  con  vuestra  comunicación,  y  ansí  me  ha  pa- 
recido esperar  á  ver  si  debéis  venir  acá,  ó  lo  que  se  resol- 


565 

verá  en  el  negocio  que  por  esa  otra  carta  os  scribiiiíos,  que 
hasta  entonces  no  hay  que  decir  en  lo  de  la  Ucencia  que  pe- 
dís ,  sino  que  podéis  ser  cierto  como  antes  de  agora  os  lo 
habernos  scripto,  que  ni  lo  que  dijieren,  scribieren  ni  trata- 
ren particulares  de  vuestras  cosas,  no  harán  cerca  de  mi 
ningún  daño  entendiendo  yo  la  afición ,  cuidado  y  diligencia 
con  que  continuamente  rae  habéis  servido  y  servís. 

Los  seis  mili  ducados  que  se  debe  á  la  gente  de  las  ga- 
leras del  tiempo  de  D.  Juan  de  Mendoza ,  será  bien  que  se- 
páis si  son  de  cuando  anduvieron  á  nuestra  cuenta  ó  á  la 
suya  por  el  asiento  que  tenia,  porque  no  se  declara  bien  en 
vuestra  carta  ni  en  el  memorial  que  sobre  esto  enviastes ,  y 
avisándonos  dello  de  una  manera  ó  de  otra  lo  mandaremos 
proveer. 

En  lo  de  las  galeras  de  Mari ,  por  la  relación  que  será 
con  esta  veréis  lo  que  ha  pasado ,  y  según  aquello  aun  no 
queda  concluido.  Si  se  le  pudiesen  pagar  las  tratas  que  ahi 
se  le  deben ,  no  habria  dificultad  ninguna  sino  que  se  efec- 
tuaría la  compra  y  se  excusaría  lo  que  de  nuevo  pide  que  se 
le  mejore  el  asiento  conforme  al  último  de  Juan  Andrea ,  y 
por  esto  será  bien  que  nos  scribais,  que  se  le  podria  asegu- 
rar en  lo  de  las  dichas  tratas,  y  daréis  orden  que  el  dicho 
Juan  Andrea  sea  satisfecho  de  las  que  ha  de  haber  este  año 
conforme  á  su  asiento. 

En  lo  de  Jorge  de  Grimaldo,  habiendo  visto  lo  que  scri- 
bís,  se  le  ha  respondido  ya  conforme  á  aquello. 

Los  seis  cañones  de  Ñapóles  enviareis  todavía  al  virey 
porque  hace  instancia  sobre  ello,  que  pues  según  scribis 
andáis  dando  orden  de  hacer  artillería  para  lo  de  ahi,  podrán 
hacer  poca  falla. 

Don  Juan  de  Villaroel  nos  ha  enviado  solamente  relación 
de  las  partidas  en  que  se  distribuyeron  el  año  pasado  de  se- 


564 

senla  y  cinco  los  dineros  que  entraron  en  poder  de  Diego  y 
Francisco  de  Portillo ,  que  todo  monta  poco  mas  de  doscien- 
tos y  cincuenta  mili  escudos,  diciendo  que  los  demás  gas- 
tos que  se  hicieron  no  pasaron  por  su  mano,  y  porque  que- 
remos tenerla  cumplida  de  todo  el  dinero  que  el  dicho  año 
pasado  proveímos  para  los  gastos  del  armada,  que  es  mu- 
cha mas  suma  que  esta ,  daréis  orden  que  luego  se  saque  y 
la  den  los  oficiales  á  quien  toca ,  y  se  nos  envíe  con  el  pri- 
mer correo ,  y  otra  de  lo  que  este  año  de  sesenta  y  seis  se 
ha  proveído,  y  de  la  manera  que  se  ha  gastado  y  distri- 
buido. 

El  contador  Orozco  os  presentará  una  carta  nuestra  so- 
bre el  negocio  que  en  ella  entenderéis.  Proveeréis  que  se 
haga  justicia  á  las  partes,  y  sea  brevemente  despachado  y 
pagado  de  lo  que  se  le  debe  de  su  sueldo. 

Y  porque  tenemos  por  cierto  que  cuando  esta  llegue  ya 
sabréis  lo  que  la  armada  del  turco  ha  de  hacer ,  y  que  sien- 
do el  tiempo  tan  adelante  se  podrán  excusar  los  dos  mili  sol- 
dados que  se  llevaron  á  Cerdeña ,  por  el  inconveniente  que 
habria  de  que  sin  necesidad  estuvieren  allí ,  os  encargo  que 
los  hagáis  licenciar  y  despedir  pagándoseles  lo  que  se  les 
debiere. 

Lo  que  falla  de  los  treinta  mili  ducados  que  arriba  digo 
para  lo  de  la  fortificación ,  enviareis  luego ,  pues  veis  lo  que 
importa  que  aquella  obra  no  pare.  Del  Bosque  de  Scgovia 
á  xí  de  agosto  de  mdlxvi  años. — Yo  el  Rey. — Francisco  de 
Eraso. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. 


365 

Carta  original  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo.  Del  Bos- 
que de  Segovia  á  11  de  agosto  de  1500. 

Le  previene  que  tenga  las  galeras  bien  dispuestas  para  en  caso 
que  el  mal  estado  de  las  cosas  ds  Flándes  le  obligue  á  ir  allí  por 
Italia  y  Alemania;  y  que  si  la  armada  turca  no  sale  de  sus  confines 
puede  enviar  la  infantería  española  de  Malta  y  la  Goleta  á  Ñapóles 
y  Lorabardía. 

(Archivo  del  Exento.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capifan  general  de  la 
mar  y  visorey  de  Sieilia :  Por  esotra  carta  veréis  lo  que  se 
responde  á  las  que  nos  habéis  scripto.  En  esta  solamente  os 
queremos  hacer  saber  que  las  cosas  de  FUindes  están  en  tal 
estado,  así  en  lo  que  toca  á  religión  como  en  oirás  pláticas, 
que  principalmente  por  el  servicio  de  Dios  Nuestro  Señor  y 
la  obligación  que  tengo  á  la  conservación  y  quietud  de  aque- 
llos estados,  he  sido  forzado  y  necesitado  de  pasar  en  ellos 
con  la  mas  brevedad  que  ser  pueda ,  para  lo  cual  voy  dan- 
do la  prisa  posible  en  asentar  las  cosas  de  acá,  y  estando  ya 
el  tiempo  tan  adelante  parece  que  tiene  muchas  dificultades 
el  pasar  por  esta  mar  de  poniente,  así  en  los  tiempos  como 
en  los  puertos  de  Francia  y  Inglaterra ,  y  sobre  todo  que 
cuando  llegase  no  podría  tener  tan  ciertos  y  continuos  los 
avisos  del  estado  en  que  se  hallaban  allá  las  cosas  que  seria 
de  muy  gran  inconviniente ,  y  por  esto  se  ha  platicado  y  mi- 
rado en  si  convernía  mas  pasase  en  Italia  y  tomar  el  camino 
de  Alemana ,  en  que  también  hay  mucho  que  considerar,  to- 
davía ha  parecido  comunicarlo  con  el  emperador  mi  primo, 
para  ver  lo  que  le  ocurre  y  la  seguridad  con  que  yo  lo  po- 
dría hacer ,  y  por  que  forma ,  que  sin  su  asistencia  no  hay 


566 

duda  sino  que  serian  doblados  los  inconvinienles  y  casi  im- 
posible, y  tengo  por  cierto  que  según  el  amor  y  obligación 
que  entre  nosotros  hay,  y  lo  que  sabe  que  importa  mi  breve 
ida  á  aquellos  estados,  y  que  por  allí  se  puede  mas  fácil- 
mente hacer ,  lo  mirará  y  resolverá  como  mas  converná  al 
bien  de  este  negocio,  y  servirá  monseñor  de  Xantone  mi  em- 
bajador que  cerca  del  reside,  que  dándole  mis  letras  lo  tra- 
te y  procure  que  con  toda  brevedad  lo  haga,  porque  el 
tiempo  importa  mucho,  y  que  os  despache  luego  un  correo 
con  lo  que  el  emperador  respondiere,  y  aunque  al  presente 
no  se  os  puede  dar  mas  certinidad,  ni  tenella  yo  todavía, 
para  en  cualquier  caso,  os  mandamos  que  desde  luego  vais 
adereszando,  proveyendo  y  previniendo  esas  galeras  ó  la  ma- 
yor parte  deüas  de  buena  gente  de  la  ordinaria ,  que  deben 
traer  jarcias ,  aderezos  y  las  otras  cosas  que  serán  necesa- 
rias ,  sin  embarazaros  en  hacer  ninguna  empresa  ó  ausen- 
cia ,  si  no  os  forzase  y  necesitase  á  ello  la  seguridad  de  los 
estados  por  razón  de  lo  que  hubiese  emprendido  ó  empren- 
diese el  armada  del  turco,  que  según  lo  que  nos  scribís  úl- 
timamente tenemos  por  sin  duda  que  no  bajará  ni  se  alar- 
gará de  sus  confines,  mayormente  estando  el  tiempo  tan 
adelante  y  tan  bien  proveídas  Malta  y  la  Goleta ,  y  vos  con 
tanto  número  de  galeras,  y  así  fué  bien  scribir  al  gran  maes- 
tre sobrel  sacar  de  los  alemanes,  porque  se  excusase  la  cos- 
ta y  gasto  extraordinario  que  hacemos,  y  tengo  por  cierto 
que  cuando  este  llegue  ya  sabréis  lo  cierto  de  lo  que  la  di- 
cha armada  hará,  y  si  fuese  vuelta  ó  no  pudiese  hacer  no- 
table efecto  con  haberse  juntado  con  ella  los  navios  de  Trí- 
poli, parece  que  será  convinienfe  que  también  saquéis  la  in- 
fantería spañola  que  está  en  Malta  y  la  Goleta  y  la  enviéis 
á  Ñapóles  y  Lombardía  con  la  mayor  brevedad  que  ser  pue- 
da ,  repartiendo  entrel  un  tercio  y  el  otro  los  soldados  spaño- 


367 

les  que  han  estado  y  residido  en  Cerdeña  á  cargo  de  D.  Gon- 
zalo de  Bracamonle  y  los  que  llevó  D.  Alvaro  de  Bazan, 
porque  no  es  bien  ni  conviene  á  nuestro  servicio  que  ande 
la  infantería  tan  devidida  ni  en  manos  de  tantos  ministros, 
y  allende  desto  se  excusará  el  gasto  que  se  tiene  con  ellos  á 
nuestra  cuenta  por  tener  sus  consignaciones  en  Ñapóles  y 
Milán,  que  yo  creo  no  subirá  del  número  ordinario  que  han 
de  tener ,  á  lo  menos  estando  tan  falto  como  está  el  tercio 
de  Lombardía,  y  avisarme  heis  del  número  de  gente  que 
quedará  en  c^da  tercio  destos ,  y  esto  podréis  bien  hacer 
antes  que  os  llegue  la  respuesta  del  emperador  y  mi  aviso 
de  lo  que  habéis  de  hacer  en  teniendo  yo  cartas  sayas ,  que 
hasta  entonces  no  habéis  de  hacer  mas  que  preveniros  y  no 
embarcaros,  según  está  dicho,  sino  solamente  en  esto  de  en- 
viar la  infantería  á  las  dichas  partes,  que  haciéndose  seria 
caminar  y  enderezar  las  galeras  hacia  acá,  y  luego  me  avi- 
sareis de  lo  que  tuviésedes  de  la  dicha  armada ,  y  de  lo  que 
en  esto  proveyéredes  y  os  pareciere  que  se  podrá  hacer  y 
cuando,  porque  venido  el  correo  que  va  al  emperador,  que 
es  ya  partido ,  os  podamos  scribir  lo  que  mas  habéis  de  ha- 
cer; y  todo  esto  haréis  con  mucho  secreto  hasta  que  yo  os 
avise  de  lo  que  habréis  de  hacer. 

Al  embajador  de  Genova  se  remitieron,  como  sabéis  últi- 
mamente, ciento  y  sesenta  y  cuatro  mili  sendos  por  letras  de 
cambio  y  crédito.  Hános  scriplo  por  letras  de  á  ocho  de  juliio 
que  solamente  ha  tomado  y  rescibido  los  sesenta  y  cuatro 
mili  dellos ,  viendo  que  la  mayor  parte  de  los  gastos  para 
que  se  aplicaban  han  cesado.  Yo  le  respondo  que  si  no  fue- 
ren menester  los  cient  mili  restantes  para  pagar  los  alema- 
nes ó  otros  gastos  muy  forzosos  y  que  corriese  sueldo  á  la 
gente  que  se  licenciare ,  de  que  le  avisareis,  si  ya  no  lo  hu- 
biéredes  hecho,  entretenga  este  dinero.  A  vos  os  encarga- 


3G8 

mos  lo  mismo,  porque  cualquiera  suma  que  alli  hubiese  de 
respecto ,  seria  muy  provechoso  para  si  hubiese  de  pasar  en 
Italia.  Del  Bosque  de  Segovia  á  once  de  agosto  de  mdlxvi 
anos. 

De  su  letra. 

Llegado  es  el  aviso  que  aquí  se  dice  de  Xantone.  Mirad 
si  por  ganar  tiempo  fuera  bien  que  os  llegásedes  á  Genova 
entretanto  que  yo  os  avisase  de  lo  que  habréis  de  hacer,  que 
será  en  teniendo  la  respuesta  del  emperador.  Yo  os  permito 
que  con  esto  hagáis  lo  que  os  pareciere  mejor,  y  todo  sea  con 
secreto. — Yo  el  Rey. — Francisco  de  Eraso. 

Sobre. — Al  lile.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  ge- 
neral de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. — En  su  mano  propia. 


Copia  de  caria  de  S.  M.  al  marqués  de  Pescara.  Del  Bus- 
que de  Segovia  11  de  agosto  de  1566. 

Le  agradece  el  cuidado  que  puso  en  llegar  á  Mesina,  y  jo  que  ha 
trabajado  para  la  defensa  de  Malta. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Ule.  marqués  de  Pescara  primo :  Vi  vuestras  letras  de  ca- 
torce y  veinte  y  siete  de  junio.  Yo  os  agradezco  y  tengo  en 
mucho  servicio  el  cuidado  y  trabajo  que  pusistes  en  llegar  á 
Mesina  y  embarcaros  y  partir  de  alli  con  la  gente  que  os  dio 
D.  García  de  Toledo  para  la  defensa  y  seguridad  de  esa  isla, 
de  que  tengo  mucha  satisfacción  y  confianza  estando  ahí 
vuestra  persona ,  aunque  la  armada  del  turco  se  quisiere 
poner  sobre  ella ,  que  no  es  de  creer  por  los  fines  que  muy 


r»60 

bien  apuntáis ;  y  así  tengo  por  cierto  que  de  los  tres  medios 
que  propusistes  al  gran  maestre  debia  tenerse  para  alojar  la 
gente ,  guardar  el  agua  y  ofender  los  enemigos ,  de  que  íué 
bien  darnos  particular  relación ,  se  habrá  tomado  y  elegido  el 
mas  conviniente  y  acertado,  y  que  el  dicho  D.  García  habrá 
enviado  y  proveído  todas  las  vituallas  y  cosas  necesarias,  y 
así  se  lo  torno  yo  á  encargar  y  mandar  con  este  correo,  y 
que  también  provea  el  dinero  que  fuere  menester  para  la 
paga  de  la  infantería  española  y  tudesca,  y  lo  que  resta  sobre 
los  siete  mili  escudos  que  decís  habia  dado  para  la  fortifica- 
ción de  San  Telmo  á  cumplimiefito  de  los  treinta  mili  que 
para  esto  se  aplicaron ,  en  que  os  torno  á  rogar  pongáis  la 
asistencia  y  diligencia  que  convenga  como  lo  11c vastes  de  acá 
por  instrucción ,  pues  veis  de  la  importancia  que  es ,  y  á  la 
continua  nos  avisareis  de  lo  que  se  ofreciere,  que  en  todo 
me  haréis  agradable  placer  y  servicio.  Del  Bosque  de  Sego- 
via  ú  XI  de  agosto  de  mdlxvi  años. 

Al  respaldo  se  lee:  Copia  de  lo  que  Su  Maj.**  scribió  al 
marqués  de  Pescara  en  xi  de  agoslo. 


Tomo  XXX.  á4 


37(5 

Copia  dfí  minuta  de  carta  de  S.  M.  al  gran  maestre.  Del 
Bosque  de  Segovia  42  de  agosto  1566.  % 

mi 
Fortificación  de  la  nueva  ciudad  de  Malta— Que  se  tranquilice 
sobre  la  carta  que  se  dijo  escribió  á  Su  Santidad,  porque  está  muy 
satisfecho  de  la  afición  que  tiene  á  las  cosas  de  su  servicio. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  iiZi.J 

Don  Felipe  por  la  gracia  de  Dios,  etc. 

Muy  reverendo  y  de  gran  religión  maestre  del  convento 
y  orden  de  San  Juan  de  Hierusalen ,  nuestro  muy  caro  y 
muy  amado  amigo :  Todas  vuestras  cartas  he  recibido  hasta 
la  última  de  28  de  junio,  y  por  ellas  he  visto  el  continuo 
cuidado  que  tenéis  de  avisarme  de  lo  que  se  entiende  siem- 
pre de  la  armada  del  turco  y  de  sus  designos  y  mudanzas, 
y  señaladamente  de  las  cosas  desa  isla  y  religión ,  y  de  la 
fortificación  della ,  y  de  la  nueva  ciudad ,  de  que  he  visto  el 
designio  (i)  que  me  enviastes,  que  me  ha  parescido  bien, 
y  que  no  podrá  dejar  de  ser  acertada  por  haber  sido  prime- 
ro tan  reconoscido  y  examinado  todo  por  vos  y  por  los  de- 
más que  lo  han  visto ,  como  por  personas  de  tanta  plática 
y  experiencia ,  y  he  holgado  mucho  de  entenderlo  por  vues- 
tras cartas ,  y  os  agradezco  y  tengo  en  la  cuenta  y  estima 
que  es  razón ,  y  no  hay  para  que  tengáis  tanta  pena  y  me 
deis  tanta  satisfacción  en  lo  de  la  carta  que  se  dijo  habíades 
escrito  á  Su  Santidad,  porque  teniendo  j'o  tan  conoscido 
vuestro  buen  ánimo  y  la  afición  que  siempre  habéis  tenido 
vos  y  todos  los  caballeros  desa  religión  á  las  cosas  de  mi 


(1)  No  está  con  la  minuta. 


tff 

servicio ,  nunca  pude  yo  creerlo  ni  lo  creo ,  sino  que  hubie- 
se sido  (si  alguna  falta  ha  parescido)  descuido  é  inconside- 
ración de  alguno ,  como  escribís ,  como  en  todas  las  cosas 
suele  acaescer ,  y  así  en  toda  esta  parle  vos  os  podéis  asegu- 
rar de  la  entera  satisfacción  que  tengo  de  vuestra  persona  y 
ánimo  y  de  todas  vuestras  acciones ,  y  asimismo  de  mi  vo- 
luntad ,  que  es  la  misma  y  aun  mayor  para  todo  lo  que  03 
tocare  á  vos  y  á  esa  religión,  y  á  la  defensión,  conservación 
y  augmento  della  como  después  acá  tenéis  expiriencia  dello, 
y  por  que  lo  demás  entenderéis  por  lo  que  el  prior  Don  An- 
tonio de  Toledo  del  nuestro  Consejo  de  Estado  os  escribirá, 
no  me  alargaré  mas  en  está  de  remitirme  á  aquello.  Y  sea 
muy  reverendo  y  de  gran  religión  maestre  nuestro  muy  caro 
amigo  Nuestro  Señor  en  vuestra  continua  guarda.  Del  Bos- 
que de  Segovia  á  i2  de  agosto  4566. 


Carta  autógrafa  de  D.  Sancho  de  Leiva  á  S.  3/.  ,  fecha  en 
Mesiua  á  i2  í/e  agosto  de  4566. 

Que  se  envian  docientos  hombres  y  dinero  á  la  Goleta  para  dejí- 
pedir  y  pagar  otro  número  igual  de  aquella  guarnición  — No  le  gusta 
la  traza  de  la  fortificación  de  aquella  plaza. 

(Archivo  general  de  Simancas.  —  Negociado  de  Estado,  legajo 
fíúm.  iíóO.J 

S.  C.  H.  M. 

En  llegando  en  Palermo  de  vuelta  de  la  Goleta  cscrebí 
á  V.  M.  lo  que  de  aquella  fuerza  se  ofrecia,  y  con  una  fra- 
gata invié  el  despacho  á  Ñapóles  al  duque  de  Alcalá,  y  por  el 
peligro  que  tienen  las  fragatas  envío  por  tierra  el  duplicado, 


ói'Z 


con  la  cual  va  esla .  Ayer  temprano  llegué  aquí ..  y  luego  dije 
á  D.  García  de  Toledo  el  mal  estado  en  que  quedaba  aquella 
fuerza  por  el  descontento  de  la  gente ,  lo  cual  él  también  vio 
por  las  cartas  de  D.  Alonso  Pimentel ,  y  habiendo  tratado  él 
y  yo  un  rato  sobre  este  negocio ,  se  resolvió  en  inviar  luego 
docientos  soldados  de  acá  para  que  D.  Alonso  pueda  dar  li- 
cencia á  otros  docientos  de  los  que  mas  tiempo  han  estado  y 
mas  necesidad  tienen  de  salir.  Yo  le  dije  que  importaba  poco 
darles  licencia  si  no  habia  con  qué  los  pagar;  queD  Alonso 
me  dijo  que  no  habia  allá  un  real,  y  que  se  debia  á  la  gente, 
desquitados  los  bastimentos  y  municiones  que  han  recebido, 
de  ciento  veinte  mil  ducados  arriba.  Al  fin  me  dijo  D.  García 
que  inviaria  también  dineros  para  pagar  los  que  despidiese. 
Yo  he  dicho  que  era  muy  señalado  servicio  á  V.  M. ,  porque 
con  esto  y  con  la  esperanza  de  que  presto  sacarán  mas  gente 
se  aquietarán  todos.  El  estado  de  aquella  fortificación  don 
Alonso  y  el  Fratin  lo  escriben  á  Y.  M.  Yo  solo  diré  una  cosa, 
que  no  he  visto  á  nadie  que  haya  visto  aquella  traza  de  los 
que  la  entienden  que  les  contente.  Yo  soy  de  la  mesma opi- 
nión. Por  lo  cual  suplico  á  Y.  M.  lo  mande  tornar  á  ver 
antes  que  se  haga  cosa  que  después  si  descontenta  sea  malo 
de  remediar.  Y  porque  he  escrito  sobre  largo  y  mas  veces 
al  duque  de  Alba,  y  me  remito  á  él ,  no  diré  mas  en  esta. 
Nuestro  Señor  la  S.  C.  persona  de  Y.  M.  guarde  con  acres- 
centamiento  de  mayores  reinos  y  señoríos  como  los  criados 
de  Y.  M.  deseamos.  De  Mesina  á  los  12  de  agosto  1566. — 
S.  C.  R.  M. — Humil  criado  y  vasallo  de  Y.  M.  que  sus  reales 
manos  besa.  — Don  Sancho  Ruiz  de  Leiva. 

Sohre  de  la  carta, — A  la  S.  G.  R.  M.  el  Roy  nuestro 
señor ,  etc. 


>»q 


0/0 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo.  Del  Bos- 
que de  Segovia  á  lo  de  agosto  de  4566. 

Dice  que  la  infantería  española  del  tercio  de  D.  Gonzalo  de  Bra- 
canvonte  y  la  que  trujo  D.  Alvaro  de  Bazan  se  reparta  en  los  ter- 
cios de  Ñapóles  y  Lonibardía. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar  y  virey  de  Sicilia :  Después  de  scriptas  las  que  van  con 
esta,  llegaron  vuestras  cartas  de  diez  y  seis,  veinte  y  veinte 
y  uno  de  jullio  con  la  relación  de  lo  que  Joan  Andrea  trujo 
de  levante  de  lo  del  armada  del  turco ,  y  pues  del  disignio 
que  llevaba  se  puede  tener  por  cierto  que  no  vernía  hacia 
esas  partes  ni  otras  de  nuestros  reinos  y  subditos,  háme  pa- 
rescido  bien  la  orden  que  distes  para  que  se  sacasen  de  Malta 
los  tudescos  por  librar  de  gasto  y  que  los  trujiesen  las  ga- 
leras de  D.  Alvaro  de  Bazan  con  las  de  los  Lomelinas  y  Cen- 
turión hasta  el  Especie  donde  se  han  de  licenciar  y  despedir, 
y  asimismo  que  de  allí  pasasen  á  estos  reinos  todas  diez  y 
siete  juntamente  con  las  dos  de  Gil  de  Andrada  para  asegu- 
rar las  flotas  que  se  esperan  de  las  Indias  y  obviar  los  daños 
que  en  las  costas  dellos  podrían  hacer  las  galeotas  y  fustas 
de  cosarios,  que  han  sido  tantos  después  que  el  dicho  don 
Alvaro  se  fué  de  acá  que  han  robado  y  tomado  mucho  núme- 
ro de  navios  y  gente  en  el  Estrecho  y  otras  partes,  y  última- 
mente cuatro  que  venían  de  las  Indias ,  y  están  al  presente 
agoardando  de  la  parle  del  dicho  Estrecho  la  flota  que  viene 


574 

muy  rica,  y  así  habíamos  acordado  de  enviar  á  mandar  con 
esle  correo  al  conde  de  Altamira  que  desde  Genova  viniese 
acá  con  las  veinte  galeras  que  le  enviastes  á  la  Goleta ,  Cer- 
deña  y  Genova ;  pero  visto  por  este  último  despacho  vuestro 
que  de  allí  habia  de  volver  á  Ñapóles  con  las  seis  compañías 
de  españoles  que  hacéis  llevar  á  aquel  reino  de  las  que  del 
se  sacaron,  y  que  ya  seria  de  vuelta,  y  que  lo  que  habéis 
[M'oveido  es  mas  a  propósito  por  lo  de  la  invernada,  escribo 
al  dicho  D.  Alvaro  y  Gil  de  Andrada  que  se  den  en  el  viaje 
la  mayor  diligencia  que  fuere  posible,  y  que  procuren  venir 
con  todo  secreto  y  sin  ser  descubiertos  de  tierra  como  os  pa- 
rece, porque  los  dichos  bajeles  no  tengan  lugar  de  huir  ni 
venir  otros  que  los  refuercen  y  se  junten  con  ellos,  y  téngoos 
en  mucho  servicio  el  cuidado  que  tenéis ,  así  de  excusar  el 
gasto  que  se  puede,  como  de  prevenir  y  atender  á  la  segu- 
ridad de  lodo. 

También  me  satisface  la  provisión  de  dinero  y  lo  demás 
que  enviastes  á  la  Goleta  con  D.  Sancho  de  Leiva  y  la  or- 
den que  le  distes  para  que  sacase  otros  mili  españoles  de  los 
del  tercio  de  Ñapóles,  y  así  porque  no  consuman  las  vitua- 
llas, como  para  que  en  las  galeras  haya  alguna  gente ;  y  pa- 
réceme  muy  acertado  que  diésedes  aviso  á  D.  Alonso  Pimen- 
tel  de  lo  que  se  entendía  de  la  dicha  armada  para  que  desde 
luego  comenzase  á  poner  mano  y  dar  priesa  en  la  fortifica- 
ción que  ha  de  quedar  conforme  al  disignio  que  llevó  el 
Fratin ,  que  cierto  me  seria  de  gran  contentamiento  se  pusie- 
se este  invierno  de  manera  que  el  verano  que  viene  no  me 
pusiese  en  nuevo  cuidado  de  meter  en  aquella  plaza  mas 
gente  de  la  ordinaria,  y  así  os  encargo  le  tengáis  vos  muy 
particular  de  que  dése  reino  se  envíen  los  materiales,  gas- 
tadores y  lo  que  mas  fuere  menester  conforme  á  lo  que  os 
tenemos  scripto. 


375 

Pues  os  pareció  enviar  á  Joan  Andrea  con  las  dos  gale- 
ras á  Genova  por  los  cieut  mili  escudos  que  allí  habian  que- 
dado en  poder  del  embajador  Figueroa  para  la  paga  de  la 
gente  y  lo  demás  necesario,  no  hay  que  decir  sino  que  creo 
no  se  ha  podido  excusar,  y  según  nos  escribe  el  dicho  em- 
bajador á  primero  de  agosto  partirla  con  ellos ,  y  asi  tengo 
por  cierto  será  llegado. 

La  infantería  española  del  tercio  de  D.  Gonzalo  de  Bra- 
caraonte  y  la  que  de  acá  llevó  D.  Alvaro  de  Bazan  en  las 
galeras,  repartiréis  en  los  tercios  de  Ñapóles  y  Lombardía, 
como  por  esa  otra  carta  os  ordenamos ,  quedando  en  ese 
reino  los  dos  mili  soldados  que  ha  de  haber  ahí ,  no  embar- 
gante lo  que  os  escribió  el  duque  de  Alcalá ,  á  quien  yo  doy 
aviso  de  lo  que  en  esto  proveemos ,  [wrque  siendo  así  como 
escribís  que  el  tercio  de  Ñapóles  no  tiene  cumplidos  tres  mili 
soldados ,  y  que  en  el  de  Lombardía  no  hay  con  mucho  otros 
tantos,  parece  que  en  ambas  partes  se  debe  repartir  los  que 
habrá  en  el  tercio  de  D.  Gonzalo  y  los  de  D.  Alvaro  que  te- 
nemos relación  que  al  presente  no  llegarán  á  dos  mili  sol- 
dados, y  como  quiera  que  sea  se  debe  esto  ejecutar  asi  por 
excusar  de  gasto  lo  de  acá ,  como  porque  los  tercios  estén 
cumplidos  y  se  excusen  tantos  capitanes  y  oficiales.  Del  Bos- 
que de  Segovia  á  xiij  de  agosto  de  1566^  —  Yo  el  Rey.  — 
Francisco  de  Eraso. 

Sobre.  —  Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. 


Copia  dti  carta  que  el  comendador  mayor  de  Castilla  es- 
cribe á  f).  García  de  Toledo  en  IG  de  agosto  de  1566. 


Para  enviar  á  S.  M. 


Dice  que  el  papa  le  reinitia  que  obrase  como  quibiere  sobre  ir  á 
Brindis  sin  contar  con  los  venecianos. 


(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  lloO.J 

-ífiUííí  Iluio.  Señor: 

A  los  15  desle  en  la  mañana  llegó  aquí  el  correo  que 
V.  S.  I.  mandó  despachar,  y  me  dio  sus  carias  de  siete  y 
ocho,  de  cuyo  rescibo  di  aviso  á  V.  S.  con  un  correo  que 
en  aquel  mismo  punto  llegó  de  España ,  despachado  al  señor 
duque  de  Alcalá,  y  por  ir  con  tanta  priesa  remití  la  res- 
puesta para  con  este  que  le  despacho ,  mas  para  cumplir  lo 
que  V.  S.  I.  mandó  y  sacalle  del  cuidado  con  que  le  tendrá 
el  saber  si  venecianos  quieren  corresponder  á  lo  que  señala- 
ron,  que  por  parescerme  que  haya  porque  despachalle,  pues 
ya  V.  S.  1.  tenia  entendido  lo  poco  que  dellos  se  podia  fiar, 
y  a  la  verdad  a  mí  tampoco  me  engañaron,  y  bien  claro  se 
lo  dije  al  papa  desde  la  primera  vez  que  me  habló  en  este 
negocio ,  y  si  no  fué  carta  mia  con  la  segunda  que  Su  San- 
tidad escribió  a  V.  S.  de  su  mano,  fué  porque  me  la  envia- 
ron á  tiempo  que  se  partía  una  estafeta  á  Ñapóles ,  y  por  no 
detenella  no  escribí,  pues  con  el  primer  correo  habia  escrito 
todo  lo  que  entonces  podia  decir.  Las  cartas  de  V.  S.  I. 
para  España  fueron  muy  pocas  horas  después  que  aquí  lle- 
garon, y  no  fué  necesario  despachar  con  ellas  correo  por 


57^ 

pasar  aquel  dia  con  toda  diligencia  uno  que  el  sefior  virry 
de  Ñápeles  mandó  despachar. 

'■^^*Yo  di  á  Su  Santidad  las  cartas  de  VJ'S.'l.  y  le  informé 
muy  particularmente  de  todo  lo  que  V.  S.  en  la^  mías  és-- 
cribe ,  y  de  lo  que  ofresce  á  Su  Santidad ,  do  que  mostró 
satisfacción ,  y  procuré  que  entendiese  cuan  fuera  habian 
estado  venecianos  de  hacer  lo  que  su  embajador  aquí  señaló, 
y  díjome  que  ellos  no  querían  obligarse  á  romper  con  el 
turco,  sino  que  solamente  decian  que  hallándose  V.  S.  I. 
con  su  armada  en  Brindis  podria  ser  que  se  ofreciese  oca- 
sión que  les  obligase  á  hacello.  En  fin ,  es  lo  mismo  que  V.  S. 
dice  que  estos  deseaban  tener  á  V.  S.  allí  para  que  pusiese 
sospecha  á  la  armada  del  turcoy  hacella  andar  mas  recatada, 
porque  de  romper  con  ella  no  creo  que  les  ha  pasado  por  el 
pensamiento  como  V.  S.  lo  habrá  entendido  por  lo  que  Garci 
Hernández  escribió  que  habian  dicho  claro  al  embajador  del 
emperador  que  residía  en  Venecia  á  los  50  del  pasado.  Yo 
dije  al  papa  cuan  poca  prenda  era  esta  para  irse  V.  S.  I.  á 
meter  en  aquel  golfo  con  armada  tan  inferior  á  la  del  turco, 
especialmente  andando  aquella  discurriéndola  costa  del  reino, 
donde  era  cosa  tan  fácil  toparse,  y  que  si  el  armada  del  turco 
se  hubiera  empeñado  sobre  Ragusa  ó  en  otra  parte ,  que  en 
este  caso  ya  V.  S.  habia  determinado  sin  pensar  en  a}'uda 
de  venecianos  de  irse  con  todas  las  galeras  á  Brindis,  y  que 
hasta  aquí  habian  estado  sin  gente  por  tenella  ocupada  eo 
Malta  y  en  la  Goleta  de  donde  se  sacaba ,  y  le  referí  ansí 
mismo  el  inconveniente  que  hubiera  habido  de  sacarla  antes. 
En  fin,  después  de  haber  pasado  muchas  cosas  sobre  esta 
materia  sin  dejar  ninguna  de  las  que  V.  S.  I.  me  escribe  y 
de  las  que  á  mí  se  me  pudieron  ofrecer  á  aquel  propósito ,  el 
papa  se  resolvió  con  decir  que  reniitia  ú  V.  S.  que  hiciese 


578 

lo  que  mas  le  pareciese  convenir  sin  lener  cuenta  con  vene- 
cianos, que  él  confiaba  que  V.  S.  no  perdería  ninguna  buena 
ocasión  que  se  le  ofresciesc  y  que  para  cualquiera  dellas  daba 
á  V.  S.  I.  su  bendición,  la  cual  le  echa  desde  acá  barias 
veces. 

Venecianos  publicaron  que  armaban  muchas  galeras ,  y 
han  armado  hartas  menos  y  despedido  parte  de  los  soldados 
que  habian  levantado,  como  V.  S.  lo  habrá  entendido,  y  toda 
su  armada  está  allí  junto  á  Venecia  sin  hacer  efecto  algu- 
no, y  Jo  que  yo  entiendo  es  que  este  embajador  que  aquí 
está  sin  orden  de  su  república  y  por  via  de  discurso  dio  al 
papa  la  intención  que  V.  S.  habrá  visto  en  tiempo  que  él 
pensó  que  no  se  pudieran  juntar  las  galeras  de  S.  M.  como 
lo  han  hecho ,  y  el  haber  andado  hasta  aquí  divididas  ha  sido 
de  mucha  importancia ,  y  asimismo  el  haber  fingido  que  se 
iban  parte  de  las  galeras  á  España ,  por  todas  las  razones 
que  V.  S.  dice,  y  por  las  mismas  he  callado  y  callaré  la  ida 
de  Pulla  y  cualquier  otra  cosa  que  V.  S.  I.  me  escribiere,  y 
si  esta  jornada  se  hiciere  pienso  que  les  ha  de  pesar  mas  á 
venecianos  de  ver  la  armada  de  S.  M.  en  su  golfo  que  la 
del  turco,  aunque  no  tienen  porque,  y  así  apuntaba  áV.  S. 
con  mucha  causa  la  seguridad  que  dellos  se  habia  de  lo- 
mar ;  pero  todo  esto  cesa  con  haberse  este  embajador  reti- 
rado de  lo  que  apuntó. 

V.  S.  I.  tendrá  á  esta  hora  aviso  cierto  del  camino  que 
la  armada  del  turco  ha  lomado ,  y  conforme  á  esto  podrá 
determinar  lo  que  mas  conviniere ;  y  paréceme  muy  bien  la 
determinación  con  que  V.  S.  estaba  de  dar  un  golpe  en  Ber- 
bería, aunque  si  el  armada  no  ha  acabado  de  retirarse ,  hará 
mudar  el  designo;  pero  el  que  V.  S.  lomare,  tendré  yo  siem- 
pre por  mejor.  Nuestro  Señor  lo  encamine  y  guarde  y  acre- 


579 

cienlc  la  lil.™^  persona  y  oslado  de  V.  S.  como  yo  deseo-  De 
Koma  á  16  de  agosto  1506. — Besa  las  manos  á  V.  S.  1.  sy 
servidor. — Don  Luis  de  Requesens. 

'  V  ,  o^^mtif] 

izarla  original  de  S.  M.  á  1).  Garda  de  Toledo^  Del  Bos- 
que de  Segovia  á  18  de  agosto  de  1566. 

Le  recomienda  al  capitán  Juan  Montiel  de  Zayas ,  y  que  favo- 
rezca los  dos  proyectos  que  le  propondrá. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar ,  visorey  y  capitán  general :  El  capitán  Joan  Montiel  de 
Zayas,  que  esta  os  dará,  nos  ha  referido  dos  particulares 
que  ha  hallado  que  del  entenderéis,  el  uno  para  poner  nues- 
tras galeras  en  otra  forma  y  orden  de  artillería  y  arcabuce- 
ría y  de  pelear,  que  en  la  que  hasta  aquí  han  estado,  con 
que  dice  que  con  gran  ventaja  y  poco  daño  dellas  se  podrán 
hacer  grandes  efectos  en  las  de  los  enemigos ;  y  el  otro  es 
cierta  orden  con  que  de  las  pagas  que  de  los  reinos  de  Ña- 
póles y  Sicilia  y  del  estado  de  Milán  se  llevan  para  la  infan- 
tería española  se  podrán  de  ordinario  sustentar  dos  mili  sol- 
dados mas  de  los  que  al  presente  se  entretienen  á  nuestro 
sueldo,  ó  ahorrar  cada  año  hasta  sesenta  mili  ducados;  y 
habiéndonos  parescido  que  si  esto  sucediese  seria  de  la  im- 
portancia para  las  cosas  de  nuestro  servicio  que  podéis  con- 
siderar, he  querido  remitíroslos  á  vos,  y  encargaros  y  man- 
daros que  oyais  al  dicho  capitán ,  y  miréis  y  e.\amineis  los 


380 

dichos  tíos  particulares,  y  la  facilidad,  costa  y  gastos  que 
tuvieren  hasta  ponerlos  en  ejecución ,  y  si  puestos  en  ella  se 
podrá  esperar  la  ventaja  del  pelear  y  los  efectos  que  dice  del 
primero  ,  y  el  fruto  y  beneficio  del  segundo,  y  todo  lo  demás 
que  en  cada  uno  dellos  se  debe  y  requiere  ver  y  examinar, 
y  entendido  todo  bien  y  las  razones  del  dicho  capitán ,  y  pa- 
recidoos  que  es  cosa  de  la  importancia  y  beneficio  que  está 
dicho,  y  digna  que  convenga  examinarse,  haréis  vos  la  prue- 
ba y  experiencia  del  primer  punto,  y  nos  informareis  particu- 
larmente del  segundo,  y  de  lo  que  os  pareciere  que  se  debe 
proveer  en  él ,  avisándonos  asimismo  de  lo  que  hiciéredes  en 
todo  ello,  porque  holgaremos  de  entender  vuestro  parecer 
en  lo  uno  y  en  lo  otro,  teniendo  por  muy  encomendado  al 
dicho  capitán  ,  así  en  esto  como  en  lo  que  ahí  se  le  ofrecie- 
re y  le  tocare  como  á  persona  que  tiene  tanto  celo  á  nues- 
tro servicio ,  y  que  también  se  ha  empleado  en  él  en  todo  lo 
(jue  se  ha  ofrecido ,  como  vos  allá  entenderéis  mas  particu- 
larmente para  emplearle  y  serviros  del  conforme  á  su  cuali- 
dad y  partes,  que  de  toda  la  merced  y  favor  que  le  hiciére- 
des recibiré  de  vos  mucho  placer  y  servicio.  Del  Bosque  de 
Segovia  á  xvni  de  agosto  mdlxvi, — Yo  el  Rey. — Antonio 
Pérez. 

Sobre. — Al  Ule.  I).  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar,  visorcy  y  capitán  general  en  el  nuestro 
reino  de  Sicilia. 


3íH 


Carla  or'ujimxl  de  D.  Garda  de  Toledo  a  S.  3/..  ¡hhn  en 
Meslna  á  20  de  agoalo  de  1 560. 

Llegada  de  la  genle  de  Malta  y  de  la  Goleta— D.  Alouso  Pimen- 
tcl  pide  algunas  cosas  para  continuar  la  forticacion  de  esta  ultima 
plaza— Presa  de  ocho  buques  con  mas  de  500  turcos— Dinero— So- 
licita licencia  para  ir  á  la  corte— Salida  de  D.  García  de  Mesina. 
dejando  levantada  caballería  para  que  acuda  á  la  defensa  de  los 
lugares  débiles. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  1130-).^, 

S.  C.  R.  M. 

A  los  siete  del  presente  escribí  á  V.  M.  lo  que  habia  que 
decir ,  y  envié  las  copias  de  lo  que  S.  S.*^  y  el  comendador 
mayor  me  escribieron  y  yo  les  respondí.  El  dia  siguiente  re- 
cibí otro  breve  de  Su  Santidad ,  la  copia  dci  cual  y  de  lo  que 
le  respondí  será  también  con  esta.  Quédame  solo  que  de,-, 
cir  que  ha  llegado  D.  Sancho  de  Leiva  con  la  gente  de  1^ 
Goleta,  el  cual  dice  que  en  la  fortificación  se  daba  gran 
priesa ,  y  no  obstante  los  gastadores  que  allí  he  enviado  que 
son  hartos  mas  de  lo  que  pensé  que  aquí  se  podían  hacerse 
eu\ian  á  pedir  otros  trescientos.  He  dado  orden  que  se  use 
toda  diligencia  en  hacerlos  para  enviárselos  con  toda  breve- 
dad. También  me  envía  á  pedir  veinte  y  cuatro  pares  de  mu- 
las  sin  otras  veinte  y  seis  que  yo  le  he  enviado ,  y  mayor 
cantidad  de  cal.  Lo  uno  y  lo  otro  se  proveerá ,  aunque  es  ya 
acabado  el  dinero  que  se  envió  señalado  de  allá  para  esto, 
y  habiendo  fallado  los  bueyes  de  Cerdeña,  aunque  fuera 
bien  que  aquellos  dineros  vinieran  aquí ,  no  me  ha  paresci- 
do  faltar  á  la  necesidad  desta  fortificación ,  no  obstante  la  que 


382 

hay  en  este  reino.  Llegó  también  el  conde  de  Altamira  á 
los  i  4  deste  con  haber  tomado  en  el  camino  ocho  navios  de 
turcos ,  en  los  cuales  ha  captivado  mas  de  300  turcos  y  li- 
bertado muy  gran  cantidad  de  cristianos,  y  entre  ellos  toma- 
do dos  de  los  mayores  navios  que  habia  en  Argel  y  de  los 
mejores  capitanes.  A  los  que  V.  M.  tiene  en  su  armada,  les 
paresce  algo  recio  ahorcar  los  arráeces ,  y  á  mí  no  me  deja 
de  parescer ,  que  aunque  esto  es  muy  bien  mandado ,  si  so 
ejecuta  podria  ser  muy  gran  daño  de  personas  principales 
que  están  captivos;  pero  todavía  es  necesario  que  V.  M.  me 
mande  avisar  si  quiere  que  esto  se  ejecute ,  ó  si  será  V.  M. 
servido  que  todos  los  arráeces  tomados  y  por  tomar  se  en- 
víen allá ,  para  que  en  Castilla ,  Aragón,  ó  Valencia,  ó  Cata- 
lunia  se  metan  en  una  fortaleza,  cual  V.  M.  mandare,  de 
adonde  no  salgan  jamás  por  el  daño  que  sus  personas  po- 
drían hacer,  porque  traerlos  en  las  galeras,  si  no  se  han  de 
ahorcar ,  están  cerca  de  las  ocasiones  que  se  suelen  ofrecer 
de  tener  algún  dia  libertad.  Y  suplico  á  V.  M.  escriba  al  vi- 
rey  de  Ñapóles  que  mande  que  los  esclavos  que  el  conde  de 
Altamira  ha  hecho  envestir  en  Puerto  Hércules ,  Pomblin  y 
Orbitelo  se  entreguen  á  D.  Juan  de  Villaroel  y  á  los  oficia- 
les que  V.  M.  tiene  en  esta  armada ,  para  que  dadas  las  par- 
tes á  quien  toca,  queden  los  otros  por  de  V.  M.  sirviendo 
en  las  galeras  que  los  tomaron.  Vino  Juan  Andrea  á  los  13 
del  presente  con  noventa  y  cinco  mil  y  quinientos  y  sesenta 
y  ocho  escudos  de  oro  en  oro,  que  le  entregó  el  embajador, 
de  ellos  se  enviaron  30  mil  escudos  á  la  Goleta ,  sin  los  ^0 
mil  que  se  le  han  enviado  estos  días  que  serán  50  mil  es- 
cudos sin  los  40  mil  del  año  pasado.  Díceme  D.  Sancho  que 
aquella  gente  estaba  desesperada ,  porque  no  se  les  daba  li- 
cencia para  salir  de  allí  á  cabo  de  tanto  tiempo  de  servi- 
cio, y  afirma  que  hay  hombre  que  ha  diez  ó  doce  años  que 


585 

pide  licencia  sin  haberla  podido  nunca  alcanzar:  con  el 
que  llevare  el  dinero  enviaré  hasta  200  ó  500  soldados  para 
que  D.  Alonso  pueda  en  su  lugar  dar  licencia  á  los  que  le 
pareciere ,  pues  llevando  el  dinero  llega  á  tiempo  que  pue- 
dan aquellos  ser  pagados  de  lo  que  hubieren  de  haber.  Don 
Juan  de  Cardona  ha  llegado  hoy  con  la  gente  de  Malta;  qué- 
dase acabando  de  despalmar  toda  la  armada ,  que  será  de 
ochenta  y  cinco  galeras ,  con  las  del  maestre  y  religión  ,  y 
siete  mil  españoles  en  ellas,  y  con  ella  partiré  mañana  á 
cumplir  lo  que  Su  Santidad  desea ,  aunque  hay  en  ello  dos 
muy  notables  inconvenientes,  el  uno  es  ser  el  armada  ma- 
yor que  la  de  V.  M.,  y  aunque  varian  en  el  número  en  cada 
aviso,  diciendo  unos  de  mas  y  otros  de  menos,  ninguno  veo 
bajar  de  125  velas ,  y  Su  Santidad  me  escribe  que  llegan  á 
ciento  y  cicuenta ,  como  V .  M.  verá  por  su  mismo  aviso, 
aunque  no  creo  tantas,  y  no  estando  estas  empeñadas  y  obli- 
gadas en  una  parte  firme,  sino  discurriendo  por  aquellas 
marinas,  es  de  muy  grande  peligro  ir  á  ellas  las  de  V.  M., 
aunque  en  esto  se  usarán  todas  las  cautelas  que  puedan  dar 
seguridad.  El  otro  inconveniente  es  ir  á  navegar  en  una  cos- 
ta que  no  hay  sino  dos  puertos:  el  uno  250  millas  de  aquí 
que  es  Taranto,  y  otras  tantas  hasta  el  de  Brindez,  y  ten- 
ga V.  M.  creido ,  que  en  toda  la  mar  no  hay  costa  mas  pe- 
ligrosa ni  mas  llena  de  borrascas ,  y  si  los  enemigos  se  en- 
tretienen en  ella,  yo  espero  que  no  saldrán  sin  rescibir  daño 
por  causa  del  tiempo,  porque  aunque  agosto  y  setiembre  es 
bueno  en  otras  costas  es  perverso  en  aquellas ,  y  no  pudien- 
do  yo  correr  en  Esclavonia  con  la  de  V.  M.  por  tener  un 
enemigo  mayor  al  lado  ,  está  claro  que  por  -voluntad  no  ha- 
bría de  irme  á  meter  en  estos  lugares.  Pero  además  de  de- 
searlo Su  Santidad,  habiendo  yo  pedido  al  virey  de  Ñapóles 
su  parescer  acerca  de  este  viaje ,  me  escribe  lo  que  V.  M. 


584 

verá ,  que  es  inclinar  á  que  lo  haga.  Si  la  armada  de  V.  M. 
no  tuviera  la  gente  en  la  Goleta  y  Malta  pudiérase  haber  ido 
con  mas  seguridad  en  los  meses  de  junio  y  julio ,  de  lo  que 
se  irá  en  el  presente  y  en  el  que  entra.  Pero  no  he  osado 
sacar  en  el  dicho  tiempo  los  soldados  destas  plazas ,  viendo 
el  particular  cuidado  que  V.  M.  ha  tenido  este  año  dellas, 
y  aunque  me  convenia  para  mi  salud  y  temblores  de  brazos 
y  pierna  tomar  de  aquí  á  ocho  dias  los  baños  de  Jaca ,  será 
forzoso  de  dejarlo  todo  por  no  faltar  al  servicio  de  V.  M.  y 
perder  en  este  mes  que  entra  la  ocasión  desta  cura ,  que 
me  afirman  los  médicos  que  era  muy  necesaria,  y  pues  pa- 
sado este  tiempo  no  puedo  curarme  en  todo  este  invierno,  si 
en  él  me  hace  V.  M.  merced  de  darme  licencia  para  ir  á  su 
corte  por  cosas  que  cumplen  á  V.  M.  mas  que  á  mí ,  tendré- 
la  por  muy  grande  merced,  ni  será  desconveniente  hallar- 
me yo  allá  para  lo  que  V.  M.  querrá  proveer  el  año  que  vie- 
ne, y  siendo  V.  M.  servido  de  hacernie  esta  merced,  podré 
ser  ahí  al  principio  de  hebrero  y  volverme  con  la  brevedad 
que  V.  M.  mandare. 

Por  esa  relación  (1)  verá  V.  M.  lo  que  pasó  Juan  Andrea 
con  las  fustas  que  encontró  yendo  él  con  las  dos  galeras  á 
Genova.  Parésceme  quo  en  todo  hizo  lo  que  debia.  A  la 
vuelta  con  el  dinero  no  le  podia  acaescer  desgracia  ningu- 
na ,  porque  yo  le  habia  ordenado  que  volviese  con  el  conde 
de  Altamira  como  lo  hizo. 

Cuando  pasé  por  Ñapóles,  viniendo  de  Genova,  decían 
todos  los  avisos  que  de  levaíite  venían  que  el  armada  no  se- 
ria de  mayor  número  que  de  noventa  galeras ,  y  por  este 
aviso  me  paresció  decir  al  virey  que  seria  bien  juntar  algu- 
na gente  de  buena  volla  para  que  se  armasen  cinco  de  la» 

(1)   No  está.  .1  ü-^i'j»-. 


585 

que  estaban  hechas ,  y  procurar  yo  de  armar  aquí  otras  tan- 
tas para  que  en  tal  caso  rae  pudiese  igualar  con  ella ;  y  vien- 
do después  que  ha  sido  de  mayor  número  de  lo  que  enton- 
ces se  decia ,  por  no  vejar  aquel  reino  y  este ,  rae  paresció 
bien  hacerlos  despedir,  porque  siendo  galeras  nuevas ,  no 
me  podían  servir,  sino  para  pelear  con  el  armada ,  y  para 
hacerlo  no  eran  bastantes  las  unas  ni  las  otras,  siendo  el  ar- 
mada del  número  que  después  se  ha  visto.  Yo  pienso  partir 
mañana  como  digo  y  aunque  es  ya  tiempo  de  no  temer  el  ar- 
mada por  estas  partes,  todavía  dejo  levantada  buen  golpe  de 
caballería  y  mandado  á  los  que  la  gobiernan  ,  que  sigan  la 
orden  que  les  di  al  principio  del  verano,  que  es  que  con  di- 
cha caballería  y  la  infantería  no  estén  á  las  espaldas  de  las 
tierras  fuertes,  sino  que  estén  á  la  mira  de  las  deshabilitadas 
y  fáciles  de  destruir  por  los  enemigos  para  que  aquellas  se 
deflendan  y  guarden,  de  manera  que  resciban  el  menor  daño 
que  se  pudiere.  Guarde  Nuestro  Señor  la  vida  de  V.  M.  por 
tan  largos  años  como  sus  criados  y  vasallos  deseamos  y  la 
cristiandad  ha  menester.  De  Mesina  á  20  de  agosto  i 566. 

Con  esta  envío  á  V.  M.  la  memoria  (1 )  de  los  bajeles 
que  se  han  tomado  este  año. — Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que 
sus  reales  pies  y  manos  besa. — D.  García  de  Toledo. 

Sobre:  A  la  S.  Cat."  R.  iM.  del  Rey  nuestro  señor. 

(1)  No  está. 


Tomo  XXX. 


58G 

'fíV 

Carta  original  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo.  Del  Bos- 
que de  Segovia  á  20  de  agosto  de  1566. 

Dice  que  favorezca  la  conjuración  que  trataba  Juan  María  Renzi 
con  varios  cristianos  renegados  de  Constantinopla  para  apoderar- 
se de  la  escuadra  del  turco  ó  incendiar  el  arsenal  y  volverse  á  es- 
tos reinos. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo ,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar ,  visorey  y  capitán  general:  Habiendo  venido  aquí  Juan 
María  Renzi  ginovts  (1)  que  por  orden  nuestra  ha  ido  dos 
veces  á  Constantinopla  y  héchonos  relación  de  cierta  conjura 
que  los  dias  pasados  por  su  parte  y  la  de  otros  cristianos 
que  allí  se  hallaban  se  trataba  y  términos  en  que  agora  úl- 
timamente quedaba ,  y  asegurádonos  del  ánimo  y  voluntad 
que  muchos  cristianos  renegados  de  los  mas  principales  tie- 
nen de  reducirse  á  nuestra  santa  fé  y  religión  y  venir  á 
nuestro  servicio  con  procurar  primero  el  levantamiento  del 
armada  del  turco  ó  parte  della  y  pasarse  con  ella  á  nos  ó 
quemar  el  arsenal  con  las  galeras  que  en  él  hubiere ,  y 
viendo  que  corresponden  á  esto  ciertas  cédulas  y  cartas  que 
el  dicho  Juan  María  nos  ha  traído  firmadas  de  muchas  per- 
sonas que  asisten  cabe  la  del  turco ,  y  tienen  en  su  servicio 
cargos  principales,  crédito  y  autoridad,  nos  ha  dado  todo  esto 
ocasión  para  dar  crédito  á  lo  que  el  dicho  Juan  María  nos 

(1)  Lo  que  va  de  cursiva  está  en  cifra  y  descifrado  encima  de 
distinta  letra. 


387 

ha  propuesto  y  ofrescido  de  parte  suya,  y  tomar  este  nego- 
cio tan  de  veras  como  la  cualidad  del  lo  requiere,  y  para  que 
tanto  mejor  pueda  venir  al  efecto  y  ejecución  que  se  pre- 
tende ,  le  habernos  mandado  despachar  con  algunas  cartas 
nuestras  para  los  dichos  renegados  principales ,  en  que  les 
animamos  y  loamos  el  buen  propósito  y  voluntad  que  tienen, 
y  á  él  le  habemos  dado  facultad  para  que  en  nuestro  nombre 
pueda  ofrescer  alguna  suma  de  dineros  y  señalarla  entre 
ellos  respectivamente ,  que  se  cumplirá  hecho  el  efecto  que 
se  pretende  y  no  de  otra  manera ,  con  el  cual  despacho  se 
parte  agora  el  dicho  Juan  María  para  Constantinopla ,  y  á 
vos  os  lo  habemos  querido  advertir  para  que  lo  tengáis  en- 
tendido como  es  razón  y  la  correspondencia  necesaria  con 
el  dicho  Juan  Marta  y  las  personas  que  él  os  escribiere  que 
convienen ,  que  á  él  le  habemos  mandado  que  demás  de  te- 
nerla con  vos  y  daros  aviso  de  todo  lo  que  fuere  tratando ,  á 
su  vuelta  de  Constantinopla  os  le  dé  muy  particular  de  lo  que 
dejare  concertado,  para  que  conforme  á  ello  vos  ahí  hagáis 
y  proveáis  lo  que  convenga.  Y  aunque  siendo  este  negocio 
de  tanta  importancia  somos  cierto  que  proveeréis  que  se 
trate  con  el  secreto  que  la  calidad  del  requiere ,  todavía  os 
habemos  querido  advertir  dello  por  lo  que  veis  que  cumple 
que  se  tenga,  y  encargaros  que  allende  desto  hagáis  todo 
buen  acogimiento  y  tratamiento  á  los  que  se  pasaren  á  nues- 
tro servicio ,  y  llegaran  ahí  con  galeras  y  otros  bajeles  (como 
tenemos  por  cierto  que  serán  algunos) ,  de  manera  que  ellos 
estén  con  satisfacción  y  contento  de  se  haber  venido  y  los 
demás  tomen  ánimo  para  hacer  lo  mismo,  y  de  los  que  así 
llegaran  ahí  nos  iréis  dando  aviso,  para  que  lo  tengamos  en- 
tendido y  demos  orden  que  se  efectúe  y  cumpla  con  ellos  lo 
que  el  dicho  Juan  Maria  les  hubiere  señalado  y  prometido 
en  nuestro  nombre ,  que  en  lo  uno  y  en  lo  otro  nos  haréis 


588 

acepto  placer  y  servicio.  Del  Cosque  de  Segovia  á  xx  de 
agosto  MDLXvi. — Yo  el  Rey. — Gabriel  de  Zayas. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo  ,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar,  visorey  y  capitán  general  en  el  nuestro 
reino  de  Sicilia. 


Carla  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M.,  fecha  en 
Mesina  á  22  de  agosto  de  1566. 

Le  avisa  su  vuelta  á  Mesina  por  haber  sabido  que  la  armada 
turca  habia  salido  de  los  mares  de  la  Marca  y  Ñápeles. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  ííóO.J 


De  letra  del  Rey  dice 
en  la  carpeta: 

"Estas  s€  vean  por  los  I  C     p     o     \i 

»delConsejodeStado,  y  las  )  o«  v^.  11.  IVl. 

»  de  Genova  me  quedan  pa- 
»ra  hacer  ver  en  el  de  Ha- 
u  cienda  por  ser  della  todo 
bIo  que  tratan.'» 


A  los  20  del  presente  escrebí  á  V.  M.  lo  que  se  ofrescia, 
diciendo  como  en  aquel  dia  me  partia  con  el  armada  de  V.  M. 
que  eran  ochenta  y  cinco  galeras ,  incluyendo  las  tres  de  la 
religión  y  dos  del  maestre,  y  que  seguirla  mi  viaje  la  vuelta 
de  Pulla  conforme  á  lo  que  Su  Santidad  deseaba  y  al  virey 
de  Ñapóles  le  páreselo ,  aunque  llevaba  poca  esperanza  de 
que  la  plática  que  venecianos  hablan  propuesto  al  papa  fue- 
se de  ningún  fundamento,  y  á  sesenta  millas  de  aquí  me  al- 
canzó un  correo  del  comendador  mayor  de  Castilla ,  y  lo  que 
me  escribió  con  él  verá  V.  M.  por  la  copia  que  va  con  esta, 
y  ansimismo  de  lo  que  dice  el  virey  de  Ñapóles  que  desde 
los  seis  que  pasó  el  armada  del  turco  por  delante  de  Veste, 


no  ser  había  sabido  mas  nueva  della,  que  era  clara  señal  de 
ser  salida  de  las  mares  de  la  Marca  y  del  reino.  Habiendo 
pensado  bien  en  el  negocio,  me  paresció  que  dejando  aparte 
ki  poca  seguridad  que  habia  en  la  navegación  de  aquella 
costa,  como  lo  tengo  escrito  á  V.  M.  y  se  ha  visto,  pues  en 
julio  han  perdido  en  ella  los  turcos  tres  ó  cuatro  galeras,  no 
convenia  proseguir  el  viaje ,  porque  si  la  armada  tenia  nue- 
va que  la  de  V.  M.  habia  llegado  en  aquellas  partes,  seria 
causa  de  hacerla  detener  á  la  mira  de  la  nuestra  ó  dársela 
para  que  volviese  en  el  reino,  de  lo  cual  se  seguiria  poco 
fruto,  y  ansí  me  resolví  en  volver  aquí  á  donde  esperaré  las 
nuevas  de  lo  que  después  habrá  hecho  el  armada  para  con- 
forme á  ello  determinarme  en  lo  que  converná  hacer  de  la 
de  V.  M.  Guarde  Nuestro  Señor  la  vida  de  V.  M.  por  tan 
largos  años  como  sus  criados  y  vasallos  deseamos  y  la  cris- 
tiandad ha  menester.  De  Mesina  á  22  de  agosto  1566.  — 
Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. 
— Don  García  de  Toledo. 

Sobre. — A  la  S.  G.  K.  M.  del  Rey  nuestro  señor. 

of  w» 

Copia  de  carta  que  D.  Garda  de  Toledo  escribe  al  comen- 
dador mayor  de  Casulla  á  22  de  ayoslo  de  1506.     }b 

Le  dice  la  causa  de  haber  vuelto  á  Mcsiua. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  nám.  iíoÚJ 

III.""*^  Señor: 

A  los  20  del  presente  escribí  á  V.  S.  I.  lo  que  se  ofres- 
cia ,  y  como  me  partía  la  vuelta  de  Pulla  con  toda  la  arma- 


390 

da ,  y  siguiendo  mi  viaje  me  alcanzó  el  correo  que  V.  S.  me 
despachó  á  los  17  del  mismo,  y  por  la  que  me  hizo  merced 
de  escribir  entendí  como  no  nos  engañamos  nada  V.  S.  y  yo 
en  la  opinión  que  teuiamos ,  de  que  la  plática  de  venecia- 
nos era  mas  aparencia  que  deseo  de  ponerla  en  efecto ,  y 
que  desta  materia  no  habia  mas  que  hablar,  y  que  Su  San- 
tidad se  resolvió  en  decir  que  me  remitía  el  ir  ó  no  en  Pu- 
lla, y  viendo  esto  y  que  el  señor  duque  de  Alcalá  me  escri- 
bió con  este  mesmo  correo  por  carta  de  los  47  que  no 
sabia  ninguna  nueva  del  armada,  después  que  pasó  por 
delante  de  Veste  á  los  seis  del  mismo ,  que  era  señal  de  ser 
salida  de  las  mares  de  la  Marca  y  del  reino,  me  páreselo 
que  del  pasar  adelante  pudiera  seguirse  daño  y  riesgo,  y 
ninguna  ganancia ,  demás  del  peligro  de  la  navegación,  por- 
que pudiera  ser  que  sabiendo  la  armada  de  mí  se  detuviera 
mas  en  aquella  frontera ,  ó  que  viniera  otra  vez  en  el  reino, 
de  manera  que  en  lo  uno  y  en  lo  otro  se  sacara  poco  fruto; 
por  lo  cual  y  otras  causas  que  tengo  escritas  á  V.  S.  acerca 
de  esta  navegación ,  me  resolví  en  no  pasar  adelante ,  y  así 
he  vuelto  hoy  aquí  en  Mesina,  adonde  espero  nuevas  del 
señor  duque  de  Alcalá  de  lo  que  se  habrá  después  entendido 
del  armada  para  conforme  á  ello  deliberar  lo  que  se  habrá 
de  hacer  desta ,  y  podrá  ser  que  vaya  á  esperar  estas  nue- 
vas en  Palermo ,  por  hallarme  mas  cerca  de  los  baños  que 
soy  forzado  á  tomar  este  setiembre ,  los  cuales  habia  diferi- 
do y  pospuesto  mi  salud  por  ir  á  cumplir  lo  que  Su  Santidad 
tanto  deseaba.  De  lo  que  en  todo  hiciere  daré  particular  avi- 
so. De  Mesina  á  22  de  agosto  1566. 


§m 


Carla  autógrafa  de  D.  Alvaro  de  Bazan  á  D.  Garda  de  To- 
ledo, fecha  en  Mesina  á  i°  de  setiembre  de  1566. 

Le  avisa  el  paradero  de  la  escuadra  turca. 
(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Illmo.  Señor: 

Este  correo  que  paso  á  V.  E.  me  ha  dado  una  caria  del 
duque  de  Alcalá ,  por  donde  entiendo  que  la  armada  es  ida 
á  la  Prevesa ,  y  que  llegarla  allí  á  los  22  del  pasado,  de  que 
he  holgado,  porque  V.  E.  tenga  mas  descanso  y  pueda  cu- 
rarse. El  tiempo  va  tan  adelante  como  V.  E.  vée  y  leñemos 
el  camino  muy  largo ,  y  así  le  suplico  que  se  acuerde  de  des- 
pacharme ,  y  también  porque  estos  soldados  no  nos  coman 
los  bastimentos  si  nos  detenemos  mucho.  Y  guarde  Nuestro 
Señor  la  111."'  persona  de  V.  S.  y  su  estado  acreciente.  De 
Mesina  á  1.°  de  setiembre  1566.  Las  Hl.""  manos  á  V.  E. 
besa. — Don  Alvaro  de  Bazan. 

So&re.— Al  111.°»°  señor  mi  Sr.  D.  García  de  Toledo,  vi- 
sorey  en  el  reino  de  Sicilia  y  capitán  general  de  la  mar. 


pob 


S92 


Carla  original  'de  1).  García  de  Toledo  á  S.  M.,  fecha  en 
Palcrmo  á  2  de  setiembre  de  155G. 


Envía  tropas  á  diferentes  puntos,  y  á  D.  Alvaro  de  Bazan  á  Es- 
paña y  á  D.  Sancho  de  Leiva  á  la  Goleta. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
nüm.  líúQ.J 


S.  G.  R.  M. 

A  los  22  del  pasado  escrebí  á  V.  M.  las  causas  que  me 
habían  movido  á  no  proseguir  el  viaje  de  Pulla,  y  que  po- 
dría ser,  si  el  tiempo  y  las  ocasiones  me  lo  concedían,  de 
dar  una  vuelta  en  Berbería.  Y  porque  desde  entonces  hasta 
los  30  del  mismo  no  tuve  aviso  de  lo  que  hacia  la  armada 
del  turco ,  me  paresció  por  mas  cautela  no  moverme  de  Me- 
sina  ni  dividir  las  galeras;  y  ansí  á  los  50  por  la  mañana 
tuve  cartas  del  duque  de  Seminara  en  que  me  escribía  que 
la  armada  habia  pasado  de  la  Belona  y  que  se  creía  iba  la 
vuelta  de  la  Prevesa,  y  habiendo  también  recibido  cartas  del 
duque  de  Alcalá  en  que  me  escribía  le  envíase  1500  espa- 
ñoles de  los  de  aquel  reino,  me  resolví  luego  en  hacerlo, 
porque  pudiese  aliviar  á  V.  M.  del  gasto  que  se  tenía  con  los 
tudescos,  y  los  hice  embarcar  en  las  galeras  que  D.  Alvaro 
lleva  á  España ,  excepto  tres  compañías  que  di  orden  fuesen 
por  tierra  para  que  el  virey  las  enviase  á  donde  mas  convi- 
niese en  las  tiendas  de  marina ,  y  hice  también  embarcar  la 
de  Lombardía  en  las  de  Juan  Andrea ;  y  en  observación  de 
lo  que  V.  M.  me  habia  mandado  el  año  pasado  envío  al 
duque  de  Alburquerque  cinco  compañías  de  las  del  tercio  de 


m 

D.  Gonzalo  dé  Bracamonte ,  que  son  del  número  que  V.  M. 
verá  en  la  memoria  que  va  con  esta ;  y  porque  creo  que  será 
D.  Gabriel  forzado  á  reformarlos ,  me  pesa  en  el  ánima  por- 
que son  rau}'  buenos  capitanes,  y  ansí  lo  son  los  demás  que 
quedan  de  aquel  tercio  de  D.  Gonzalo ;  y  en  caso  que  ven- 
gan á  ser  reformados,  suplico  á  V.  M.  que  rae  mande  es- 
crebir  qué  entretenimiento  se  les  ha  de  señalar  al  mes  para 
poder  esperar  hasta  que  V.  M.  los  mande  emplear  en  otra 
cosa.  Otras  seis  van  á  Cerdeña  porque  el  duque  de  Alcalá 
rae  escribió  que  no  habia  raenester  mas  soldados.  Ansí 
como  V.  M.  habrá  visto  por  la  copia  de  su  carta  que  envié 
los  dias  pasados ,  y  por  esperar  otro  aviso  de  la  armada  ,  no 
obstante  que  yo  me  partí  de  Mesina  á  los  50  por  lomar  la 
muestra  en  Lipar  y  en  aquellas  islas  á  la  infantería  de  Lom- 
bardia  y  Cerdeña,  ordené  á  D.  Alvaro  de  Bazan  y  á  las  ga- 
leras de  Genova  y  Saboya  que  no  se  partiesen  de  allí ,  y  lo 
mismo  á  Juan  Andrea  que  le  envié  del  camino  hasta  que  yo 
tuviese  otra  nueva  de  la  armada,  y  pudiese  conforme  á  ella 
enviarlos  ó  entretenerlos ,  y  llegando  aquí  á  Palermo  á  pri- 
mero de  setiembre  me  alcanzó  una  fragata  con  avisos  que 
el  armada  llegaría  á  los  22  en  la  Prevesa ,  y  por  via  de  Gorfo 
tuve  la  misma  nueva ,  y  ansí  me  he  resuelto  en  dar  orden  á 
D.  Alvaro  de  Bazan  que  siga  su  viaje,  y  lo  mismo  á  los  de- 
más, para  que  se  alivie  en  ambas  partes  el  gasto  de  los  ale- 
manes; y  por  este  respecto,  y  que  las  galeras  vayan  en  Es- 
paña en  mejor  tiempo  y  con  mas  seguridad ,  y  por  estar  este 
tan  adelante ,  y  incierto  lo  que  se  podía  pretender  de  hacer  en 
Berbería  por  estar  la  armada  en  la  Prevesa ,  no  muy  lejos  de 
la  de  V.  M. ,  y  ser  necesario  esperar  á  ver  qué  camino  hacia 
desde  allí ,  me  ha  parescido  de  no  emprenderlo  ,  y  también 
por  enviar  á  D.  Sancho  de  Ley  va,  como  lo  hago,  á  la  Go- 
leta con  quince  galeras  suyas  y  seis  de  las  que  están  á  mi 


394 

cargo  y  del  de  Sicilia  para  que  ayude  todo  este  mes  de  se- 
tiembre y  hasta  los  diez  del  que  entra  á  la  fábrica  de  aquella 
plaza,  como  lo  escrebí  á  V.  M.  que  lo  haría  á  los  20  del 
pasado,  y  para  llevar  dineros  y  algunos  soldados  con  que 
pueda  D.  Alonso  dar  licencia  á  los  que  se  hallan  mal  con- 
tentos. 

La  infantería  de  Lombardía  y  Cerdeña  va  pagada  por 
todo  agosto  y  mas  se  le  ha  de  descontar  lo  que  comerán 
hasta  que  los  desembarque,  que  con  todo  se  terna  cuenta. 
Será  necesario  que  V.  M.  mande  escrebir  al  embajador  de 
Genova  que  provea  de  las  pagas  á  la  gente  de  Cerdeña  ó  á 
quien  V.  M.  sea  servido,  porque  de  otra  manera  pasarán  ne- 
cesidad y  los  alojamientos  á  donde  estuvieren  fastidio. 

La  relación  de  lo  que  se  ha  dado  á  D.  Alvaro  de  Bazan 
en  victuallas,  se  enviará  con  el  primero  á  V.  M.,  y  lo  que 
ha  rescibido  en  dinero  han  sido  siete  mil  escudos ,  porque 
decia  que  no  podia  sustentar  las  galeras  ni  la  gente  sin  ellos. 
Nuestro  Señor  la  vida  de  V.  M.  guarde  y  ensalce  con  el 
acrescentamiento  de  reinos  y  señoríos  que  sus  criados  y  va- 
sallos deseamos.  De  Palermo  á  2  de  setiembre  de  1566. — 
Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. — 
Don  García  de  Toledo. 

Sobre  de  la  car/a.  —  A  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro 
señor.  ai 

i;m 
ifiq 

¡l£í 

13ÍI 

...K 


595 


Copia  lie  mimila  de  carta  de  I).  Garda  de  Toledo  á  don 
Alvaro  de  Dazan ,  o  de  setiembre  de  1566. 

Teniendo  aviso  del  virey  de  Ñápeles  que  ,'la  armada  turca  estaba 
en  laPrevesa,  le  encarga  que  continúe  su  viaje. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
Muy  Ille.  Señor  : 

A  primero  del  presente  llegué  aquí  con  todas  las  galeras, 
y  al  entrar  en  el  puerto  rescebí  la  carta  de  V.  S.  de  los  xxx 
del  pasado ,  y  pesóme  de  entender  que  no  se  hubiesen  dado 
los  soldados  que  ordené ,  porque  ha  sido  inconveniente  dejar- 
se de  hacer.  V.  S.  los  mandará  consignar  á  Palenzuela,  ayu- 
dante de  sargento  mayor  deste  reino ,  que  irá  ahí  con  una 
carta  del  maestre  á  tomarlos. 

De  verdad  que  yo  he  tenido  la  misma  soledad  que  se  rae 
dice  de  la  quedada  de  V.  S.  y  de  ver  volver  al  señor  Juan 
Andrea  y  á  todos  esos  señores,  que  tan  buena  compañía  no 
podia  dejar  de  dar  soledad.  Yo  rescebí  también  al  punto  que 
aquí  llegué  cartas  del  señor  virey  de  Ñapóles,  en  que  me 
escribe  que  por  los  últimos  avisos  que  tenia  y  me  envía, 
creía  que  la  armada  seria  ya  en  la  Prevesa ,  y  siendo  esto 
ansí  y  el  tiempo  tan  adelante  ,  me  paresce  que  V.  S.  puede 
partirse  con  la  bendición  de  Dios  y  seguir  su  viaje ,  del  pro- 
greso del  cual  y  de  las  partes  á  donde  llegare  holgaré  que 
me  dé  aviso  y  de  lo  demás  en  que  por  acá  se  podrá  hacer 
servicio  á  V.  S. 

El  capitán  Francisco  de  Eraso  se  ha  quedado  ahí  con  ua 
esclavo  del  rey  que  se  diee  Tarraguilla  sin  haber  pedido  li- 


596 

cencía  para  ello.  V.  S.  le  mandará  buscar  y  decirle  que  res- 
tituya el  dicho  esclavo ,  y  V.  S.  lo  hará  consignar  á  Juan 
Pérez ,  municionero  en  la  atarazana,  y  que  se  cobre  un  co- 
noscimiento  del ,  el  cual  me  enviará  V.  S. ;  y  si  el  dicho 
Eraso  se  porná  en  dejar  de  dar  dicho  esclavo,  V.  S.  le  cons- 
treñirá á  que  lo  dé. 

Al  respaldo  se  lee:  A  I).  Alvaro  de  Bazan,  en  5  de  se- 
tiembre 1566. 


Carla  original  del  secrelario  Zayas  á  D.  García  de  Toledo, 
fecha  en  Segovia  á  4  de  setiembre  de  1566. 

Le  recomienda  al  capitán  Juan  Montiel  de  Zayas. 

(Archivo  del  Exorno.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Ill."o  y  Ex."»  S.««  : 

Aunque  con  la  carta  de  V.  E.  me  scribió  los  dias  pasa- 
dos rescihí  toda  la  merced  y  favor  posible,  no  he  respondido 
antes  porque  después  que  fallesció  Gonzalo  Pérez  mi  señor, 
que  haya  gloria ,  he  andado  y  aun  ando  agora  muy  fallo  de 
salud;  pero  con  ella  ó  sin  ella  serviré  siempre  á  V.  E.  con 
la  voluntad  que  debo  en  esto  poquillo  que  yo  pudiere  y  va- 
liere. 

Ya  debe  conoscer  V.  E.  al  capitán  Juan  Montiel  de  Za- 
yas, y  sabrá  los  trabajos  que  ha  tenido  desde  la  jornada  de 
los  Gelves.  De  todos  le  ha  sacado  Dios  y  S.  M.,  que  muy 
bien  informado  de  su  inocencia  le  ha  absuelto  y  vuelto  en  su 
gracia  y  honor,  porque  la  verdad  en  fin  tiene  gran  fuerza, 
y  así  le  envía  á  V.  E.  con  ciertos  negocios  de  harta  inipor- 


597 

taocia  para  su  servicio,  y  mandádolc  dar  ayuda  de  costa 
para  el  camino,  el  cual  tomará  luego  para  ser  ahí  lo  mas 
presto  que  pudiere ,  y  pues  es  cosa  mia,  desde  agora  suplico 
á  V.  E.  lo  mas  ejicarescida mente  que  puedo  le  mande  acoger 
y  favorescer  como  á  tal,  señaladamente  si  hubiere  comodi- 
dad de  darle  alguna  compañía  ó  cosa  tal  en  que  emplealle 
después  que  se  haya  puesto  en  ejecución  lo  que  lleva  á  car- 
go del  servicio  de  S.  M.;  y  demás  de  esto  suplico  á  V.  E.  le 
mande  cumplir  lo  mejor  y  mas  presto  que  se  pudiere  una 
carta  que  lleva  de  S.  M.  para  V.  E.,  en  que  le  manda  pagar 
ciertos  dineros  que  se  le  deben  y  tiene  de  ellos  muy  gran 
necesidad ,  y  haremos  ambos  cuenta  que  se  los  da  dados 
V.  E.,  cuya  111.™*  persona  y  estado  Nuestro  Señor  guarde  y 
augmente  como  puede.  De  Segovia  á  iiij  de  setiembre  4566. 
— De  V.  E.  mas  cierto  servidor  que  sus  III. ""^^  manos  besa. 
— Zayas. 

Sobre.— A.\  Ill."«  y  Ex."»  Sr.  D.  García  de  Toledo,  ca- 
pitán general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia. 


Carla  aulógraf'a  de  D.  Alvaro  de  Bazan  á  D.  García  de  To- 
ledo, fecha  en  Mesina  ál  de  setiembre  de  4566. 

Le  participa  su  salida  de  Mesina 

(^Archivo  del  Excmo.  Sr.  dtiqtte  de  Medinasidonia.J 

Illmo.  Señor  : 

La  carta  de  V."  Ex.^  rescibí  ayer  con  la  fragata,  y  lue- 
go di  á  estos  señores  generales  las  que  venían  para  ellos,  y 
yo  me  apresté  para  partir  hoy  siete  del  presente.  Beso  la^ 


598 

manos  de  V.  Ex.*  por  el  cuidado  que  tuvo  de  despaeharme, 
y  ansí  suplico  lo  tenga  de  mandarme  siempre  en  que  le  sir- 
va. Los  setenta  soldados  que  faltaban  para  el  cumplimiento 
que  V.  Ex.'  mandó,  se  entregaron  al  tiniente  de  sargento 
mayor,  como  V.  Ex."  ordenó,  y  diérase  mas,  sino  que  con 
haber  fama  que  iban  á  la  Goleta  se  han  desaparecido  mu- 
chos. Juan  de  Eraso  no  está  aquí  y  se  volvió  á  Palermo ,  y 
por  esto  no  se  pudo  hacer  la  diligencia  del  sclavo.  Y  guarde 
Nuestro  Señor  la  111.™^  persona  de  V.  Ex.^  con  el  acrescen- 
tamienlo  de  estado  que  sus  servidores  deseamos.  De  galera 
en  el  puerto  de  Mesina  7  de  septiembre  1566  años. — Las 
jll  mas  manos  á  Vuesa  Ex."  besa. — Don  Alvaro  de  Bazan. 

Sobre. — Al  111.'"**  señor  mi  Sr.  D.  García  de  Toledo,  vi- 
sorey  del  reino  de  Sicilia  y  capitán  general. 


Caria  original  del  principe  de  Melilo  á  D.  Garda  de  To- 
ledo. Barcelona  9  de  setiembre  de  1566. 

Se  alegra  de  las  buenas  nuevas  que  le  daba  de  la  armada  ene- 
miga—  Indisposición  de  Felipe  II  y  su  muger. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
Illmo.  Señor: 

A  los  7  de  este  recibí  la  carta  de  V.  S,*  de  los  20  del 
pasado;  y  la  que  escribí  á  V.  S.'  á  los  once  del  mismo  ha- 
brá ya  V.  S.**  visto.  De  que  se  tengan  las  nuevas  de  la  ar- 
mada del  turco  que  V.  S.*  últimamente  me  escribe,  he  hol- 
gado mucho  por  ir  de  la  manera  que  va ,  y  V.  S.*  siguién- 
dola con  la  de  S.  M.:  el  hacello  sea  del  efecto  que  V.  S.* 


m 

(lesea,  que  es  el  mismo  que  yo  querría.  De  lo  que  sucediere 
me  mandará  V.  S.*  dar  aviso  y  de  su  salud :  aquí  la  tene- 
mos á  Dios  gracias  y  la  princesa  besa  las  manos  á  V.  S.' 
El  correo  que  lleva  esta  no  me  ha  traído  las  nuevas  de  la 
salud  de  S.  M.  que  yo  deseo,  porque  me  escriben  que  á  los 
cuatro  deste  le  habían  sangrado  por  una  calentura  que  ha- 
bía tenido  el  día  antes,  y  quedaba  de  la  sangría  con  buena 
díspusicíon.  Sáquenos  Nuestro  Señor  del  cuidado  que  tene- 
mos de  su  salud  con  dársela  muy  cumplida  muchos  años. 
La  reina  nuestra  señora  estaba  muy  mejor.  Guarde  Nuestro 
Señor  la  111.™'  persona  de  V.  S.""  y  estado  acreciente.  En  Bar- 
celona 9  de  setiembre  1566. 

De  su  letra. 

Senador  de  V.  III."' — El  príncipe  duque. 
Sobre. — Al  111.""'  señor  mí  Sr.  D.  García  de  Toledo,  ge- 
neral de  la  mar  y  virey  de  Sicilia ,  etc. 

Carla  autógrafa  de  D.  Alvaro  de  Bazan  á  D.  García  de 
Toledo,  fecha  en  Ñapóles  4  15  de  setiembre  de  1566. 

Le  avisa  su  llegada  á  Ñapóles ,  y  que  en  las  aguas  de  San  Lú- 
car  diez  y  siete  galeotas  enemigas  habían  cogido  una  carabela  con 
docíentos  mil  ducados, 

f  Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

Illmo.  Señor  : 

Llegué  á  Ñapóles  á  los  nueve  deste  mes ;  hallé  aquí  al 
señor  conde  y  marqués  de  la  Fabara ,  y  creo  que  tienen  tan 
poca  gana  de  salir  de  aquí  que  me  he  de  ver  en  trabajo  de 


400 

sacarlos.  El  señor  prior  está  ca  Gaeta  esperándome.  El  con- 
de y  el  marqués  con  otros  cuatro  caballeros  van  en  mi  pa- 
trona,  y  el  señor  prior  y  los  demás  en  mi  capitana.  Aquí  he 
hallado  nueva  questaban  á  los  diez  de  julio  diez  y  siete  ga- 
leotas sobre  San  Lúcar  y  que  habian  tomado  la  carabela  que 
venia  de  aviso  delante  de  la  flota  con  docientos  mil  ducados 
y  otras  naos  y  quesperaban  la  flota ,  y  así  me  he  proveído 
aquí  de  lo  necesario  hasta  fin  de  octubre ,  por  ir  con  mas 
presteza  y  no  detenerme  en  Barcelona  ni  Málaga  á  tomar 
bastimentos.  También  llevo  un  buque  de  Genova ,  porque  la 
patrona  de  Negron  no  se  podía  tener  en  el  agua ,  y  dármela 
ha  en  el  Andalucía  y  el  mando  en  ella.  Espero  en  Dios  que 
con  la  buena  ventura  de  Vuesa  Ex.**  he  de  tomar  estas  ga- 
leras. De  lo  que  sucediere  siempre  avisaré  á  Vuesa  Ex."  Cuya 
III.™*  persona  Nuestro  Señor  guarde  y  estado  acreciente.  De 
Ñapóles  á  xni  de  setiembre  de  15G6. 

Yo  parto  en  este  punto. 

Las  III."^*  manos  á  Vuesa  Ex.*  besa.  —Don  Alvaro  de 
Bazan. 

Sobre. — Al  III. '""  señor  mi  Sr.  D.  García  de  Toledo,  viso- 
rey  del  reino  de  Sicilia  y  capitán  general  de  la  mar  por  S.  M. 


101 


Carla  autógrafa  de  /).  Alvarü  de  Bazan  á  D.  García  de  To- 
ledo ,  fecha  en  Ñapóles  á  iode  setiembre  de  Í56G. 

Dice  que  ha  tomado  los  bastimentos  necesarios  para  ?u  viaje  á 
Espaua. 

(Archivo  del  Excmo^  Sr^  duque  de  Medinasidonia.) 
Illmo.  Señor: 

Después  de  habef  escrito  á  Vuesd  Ex.*  me  dijo  D.  Juan 
de  Villarroel  que  screbia  á  Vuesa  Ex.'  que  yo  había  tomado 
aquí  tantas  vituallas  sobre  las  que  tomé  la  otra  vez ,  que  se 
admiraba.  Y  pues  Vuesa  Ex.*  sabe  como  tratar  destos  nego- 
cios, creo  no  se  admirará  de  que  lo  escriba.  Cuando  yo  pasó 
por  aquí  tomé  bastimentos  para  tres  meses  por  no  pedillos  á 
Vuesa  Ex.*,  ni  darle  pesadumbre;  y  corno  Vuesa  Ex.*  me 
tomo  mucha  parle  del  pescado ,  aceite  y  vinagre ,  y  pan  y 
carne  salada ,  y  no  se  volvió  por  no  habello  mas  que  el 
pan  y  tocino ,  lo  demás  hacia  falta ,  juntándose  con  haber 
comido  de  las  vituallas  que  he  dicho  veinte  días  ochocientos 
soldados  ,  y  así  yo  no  he  tomado  mas  que  lo  que  justamente 
fué  menester  para  de  aquí  á  Ou  de  octubre,  que  son  para 
cuarenta  y  tres  dias,  y  esto  de  solo  vino  y  pescado ,  y  aceite, 
y  vinagre ,  y  habas,  y  trocado  los  ferros  que  traia  que  ao 
podian  servir  y  el  buque  de  la  Señoría  que  he  scripto  á  Vuesa 
Ex.',  y  lo  que  para  esto  fué  menester  hizo  la  cuenta  el  vee- 
dor deslas  galeras  y  con  su  intervención  se  tomó ;  y  dejado 
aparte  (pie  era  menester  para  el  viaje  por  la  nueva  que  hay 
de  galeras  en  España ,  me  pareció  de  ir  proveído  de  aquí 
por  no  perder  tiempo  en  andar  tomando  vituallas  en  playas 
Tomo  XXX.  26 


402 

y  poder  hacer  diligencia  sin  detenerme ;  y  aunque  me  pesa 
de  que  Vuesa  Ex.*  lea  estas  pesadumbres,  me  paresció  que 
con  venia  porque  Vuesa  Ex.*  entienda  lo  que  acá  ha  pasado 
y  lo  que  se  ha  hecho ,  como  es  razón.  Y  guarde  Nuestro 
Señor  su  111.™^  persona  y  estado  acresciente.  De  Nápolcs 
á  4o  de  setiembre  de  1566. ■ — Las  Illmas.  manos  á  V.  Ex.* 
besa.  — Don  Alvaro  de  Bazan. 

Sobre.  —  Al  III. ™°  señor  mi  señor  D.  García  de  Toledo, 
visorey  en  el  reino  de  Sicilia  y  capitán  general  de  la  mar. 


Carta  original  de  D.  García  de  Toledo  á  S.  M. ,  fecha  en 
Jaca  á  iS  de  setiembre  de  Í5&Q. 

Respondidas  á  27  de  noviembre  de  rpano  de  Erase. 

Manifiesta  á  S.  M.  que  eíi  sabiendo  que  el  emperador  de  Aus- 
tria le  permite  pasar  á  Flándes  por  Alemania  partirá  á  Ñapóles  á 
esperar  sus  órdenes — Noticias  de  la  armada  enemiga — Fortifica- 
ción de  la  Goleta— Cuentas — Bizcocho. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado ,  legajo 
núm.  \\Z^.) 

S.  C.  R.  M. 

Ayer  rescibi  todos  los  despachos  de  V.  M.  y  principal- 
mente la  carta  de  los  i  1 ,  en  que  me  manda  escrebir  la  de* 
liberación  que  ha  hecho  de  pasar  en  Flándes,  y  que  por 
haber  tantos  inconvenientes  para  hacello  por  el  mar  de  po- 
niente, habia  comunicado  con  el  emperador  si  seria  mas  á 
proposito  hacello  por  Italia  por  las  causas  que  V.  M.  con 
mucha  razón  apunta ,  mandándome  que  yo  tenga  todas  las 


405 

galeras  en  orden  para  en  caso  que  V.  .M.  se  resuelva  de 
pasar  por  Italia ,  y  que  monseñor  de  Xantone  rae  dará  aviso 
de  lo  que  el  emperador  respondiere ,  y  V.  M.  me  escribe  de 
su  mano  que  si  después  de  haber  rescibido  el  aviso  de  Xan- 
tone me  paresciere  por  ganar  tiempo  irme  á  esperar  su  ór* 
den  y  mandamiento  en  Genova  que  lo  haga ,  y  que  todo  sea 
con  secreto,  el  cual  se  terna  como  se  acostumbra  en  cuanto 
cumple  al  servicio  de  V.  M.  A  mí  me  pesa  en  el  ánima  que 
las  cosas  de  Flándes  estén  en  tal  estado  que  fuercen  á  V.  M. 
á  ir  á  poner  remedio  en  ellas  con  tanto  riesgo  y  peligro  de 
su  persona  habiendo  de  navegar  en  tiempos  contrarios ..  que 
aun  pensar  en  aventurar  solas  las  galeras  me  pone  gran 
miedo ,  cuanto  mas  trayendo  su  real  persona  en  ellas :  pero 
por  obedescer  el  mandamiento  de  V.  M.  quedo  poniendo  en 
orden  las  galeras  que  acá  han  quedado,  porque  como  V.  M. 
habrá  visto  por  mis  cartas ,  las  del  cargo  de  D.  Alvaro  y  las 
que  con  él  envío  han  ido  la  vuelta  de  allá,  y  si  no  fuera  por 
el  motivo  del  papa  y  venecianos ,  el  cual  me  estorbó  que  no 
fuesen  cuando  me  determiné  en  ello ,  ya  estuvieran  en  esas 
partes ,  y  las  fustas  no  hubieran  hecho  el  daño  que  se  dice. 
Las  de  Juan  Andrea  y  Florencia  fueron  á  llevar  la  infantería 
de  Cerdeña  y  Lombardía  ,  porque,   como  escrebí  á  V.  íM., 
el  duque  de  Alcalá  no  habia  querido  que  se  le  rehiciese  su 
tercio,  y  esta  orden  de  V.  M.  en  que  se  lo  mandaba  no  llegó 
á  tiempo.  He  escripto  á  estas  dos  partidas  de  galeras  de  Juan 
Andrea  y  Florencia ,  que  por  algunos  respectos  que  cumplen 
al  servicio  de  V.  M.  no  las  desarmen  hasta  tener  otro  aviso 
mió ,  y  porque  habia  enviado  á  D.  Sancho  de  Leiva  con 
veinte  y  una  galeras  á  la  Goleta  para  quíí  con  la  gente  de- 
Has  ayudase  á  la  fábrica  de  aquella  fuerza  hasta  los  i  O  de 
octubre,  como  lo  escribí  á  V.  M.  que  lo  baria  ,  le  he  des- 
pachado luego  fragatas  para  que  se  venga  á  juntar  conmigo. 


404 

A  D.  Alvaro  de  Bazan  no  me  ha  parescido  enviar  orden  nin- 
guna ,  porque  sabiendo  V.  M.  que  va  allá,  podrá  dársela 
conforme  á  la  resolución  que  tomare  para  que  espere  á  donde 
mas  convenga.  Yo  holgara  que  esta  orden  de  V.  M.  me  to- 
mara con  mas  salud  para  poderle  servir  mejor  en  el  viaje, 
que  por  falta  della  he  venido  aquí  en  Jaca  á  tomar  los  baños, 
y  en  acabándolos  me  iré  á  Palermo ,  y  como  vea  el  aviso  de 
Xantone  de  la  resolución  que  el  emperador  toma,  me  par- 
tiré para  Ñapóles  por  tener  ganado  parte  del  camino ,  y  creo 
que  con  detenerme  allí  pocos  dias  me  lomara  la  última  orden 
de  V.  M.  ,  porque  en  caso  que  no  se  hubiese  de  embarcar 
este  invierno  y  seria  muy  dañoso  y  peligroso  haber  de  pasar 
dos  veces  con  tantas  galeras  de  playa  romana. 

Lo  que  sé  de  la  armada  del  turco  después  que  pasó  de 
la  Belona,  verá  V.  M.  por  la  relación  que  va  con  esta,  y  el 
entender  yo  que  iba  la  vuelta  de  la  Previsa  y  ver  juntamenle 
la  necesidad  que  había  de  las  galeras  en  España  y  de  ahor- 
rar á  V.  IVL  el  gasto  que  se  tenia  en  Ñapóles  y  Lombardía 
con  los  alemanes ,  me  hizo  resolver  en  dividir  las  galeras, 
sin  pretender  como  lo  tuve  en  pensamiento  alguna  cosa  en 
Berbería,  aunque  también  estaba  el  tiempo  muy  adelante 
para  ello,  y  para  esta  nueva  orden  que  ha  venido  de  V.  M. 
no  hubiera  sido  al  propósito. 

De  la  fortificación  de  la  Goleta  tengo  tan  particular  cui- 
dado como  veo  que  conviene  al  servicio  de  V.  M. ,  y  todo  lo 
que  de  aquí  he  podido  proveer  hasta  ahora  se  ha  hecho  con 
mucha  diligencia,  y  con  estas  fragatas  que  he  enviado  agora 
á  la  Goleta  he  escrito  á  D.  Alonso  que  me  avise  el  número 
de  gastadores  que  allí  le  quedan ,  y  muradores  y  oíros  ofi- 
ciales, para  saberlo  y  proveerle  de  mas,  ansí  como  V.  M. 
lo  manda ,  y  lo  haré  antes  que  me  parta ,  que  cierto  deseo 
ver  á  V.  M.  fuera  del  cuidado  que  tiene  de  aquella  plaza,  y 


405 

con  razón  siendo  de  la  importancia  que  es ;  y  al  Fratin  he 
escrito  también  que  me  avise  de  contino  de  todo  lo  que  le 
ocurriere  y  fuere  menester. 

Ya  yo  escrebí  á  V.  M.  dende  Genova  la  causa  por  qué 
no  se  enviaba  el  bilanzo  general  de  todo  el  rescibo  y  gasto 
que  se  habia  hecho  el  año  pasado,  y  á  boca  lo  tornaré  á  refe- 
rir á  V.  M.,  certificándole  que  cada  mes  liolgariayo  que  tu- 
viese V.  M.  particular  relación  y  noticia  de  lo  que  se  rescibe 
y  gasta,  y  como  yo  vuelva  en  Palermo  lo  haré  acabar  y  se 
dará  mas  particular  razón  á  V.  M.  En  la  cuenta  del  gasto 
deste  año  presente  se  queda  entendiendo:  yo  veré  de  hacerla 
concluir  con  la  mas  brevedad  que  se  pueda,  y  daré  también 
noticia  á  V.  M.  Creo  que  sobrará  alguna  cuantidad  de  dine- 
ros; la  que  fuere  yo  mismo  la  llevaré  para  que  disponga 
V.  M.  della  á  su  voluntad. 

Porque  la  navegación  del  invierno  suele  ser  mas  incierta 
de  lo  que  hombre  se  piensa,  no  obstante  que  las  galeras 
irán  bien  proveidas  del  bizcocho  necesario,  todavía  porque 
podria  ser  forzarnos  los  tiempos  á  estar  en  algún  puerto  mas 
de  lo  que  pensásemos,  y  en  el  comernos  la  panática  de  ma- 
nera que  nos  viniésemos  á  ver  en  necesidad,  será  necesario 
para  prevenir  á  esto  que  no  habiendo  bizcocho  en  Barcelona 
mandar  V.  M.  venir  en  Rosas  del  que  se  habia  hecho  para 
lo  de  Argel  hasta  diez  ó  doce  mil  quintales  en  dos  naves ,  y 
yo  también  proveeré  á  Genova  de  algún  trigo  para  la  vuelta, 
porque  no  sea  necesario  comprar  bizcocho,  porque  siempre 
vale  allí  á  muy  altos  precios.  Y  Nuestro  Señor  guarde  la  vida 
de  V.  M.  por  muy  largos  años  como  lo  ha  menester  la  cris- 
tiandad. De  Jaca  á  i8  de  setiembre  1566. — Criado  y  va- 
sallo de  V.  M.  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. — Don  Care- 
cía de  Toledo. 

Sobre  de  la  carta.  — A  h  S.  C.  R.  M.  el  Rey  nuestro 
señor.  í»"P  ^ 


Carta  original  de  D.  Francisco  de  Eraso  á  D.  Garda  de 
Toledo,  l'epha en  Seguvia  á  26  de  setiembre  de  i56G. 

Le  dice  que  S.  M.  todavía  no  ha  resuelto  nada  sobre  la  licen- 
cia que  solicita  para  venir  á  España — Enfern^edad  del  rey,  de  su 
esposa  y  de  D.  Juan  de  Austria. 

(Archivo  ^el  Ejpcmo.  Sr.  duque  de  Meditiasidonia.) 
Muy  IliJ^*'.  Señor; 

Las  cartas  de  V.  S.^  de  siete  y  veinte  del  pasado  he  res- 
cibido ,  y  poco  después  llegaron  hartas  de  S.  M.  y  mias, 
donde  se  satisfizo  á  todo  lo  que  V.  S.^  había  scripto ,  con 
que  habrá  salido  del  cuidado  que  desto  quedaba :  acá  le  te- 
nemos hasta  saber  el  subceso  del  viaje  que  Y.  S.^  hizo, 
sobre  que  hablé  largamente  á  S.  M. ;  y  pues  así  en  este 
punto  como  en  los  demás  responde  á  V.  S.*  lo  que  verá  ,  y 
le  advierte  de  la  resolución  que  ha  tomado  en  lo  de  la  infan- 
tería para  su  pasada  en  Flándes ,  quiérame  remitir  al  despa- 
cho que  va  con  esta  y  no  embarazar  á  V.  S.^  con  referírselo, 
solo  me  queda  qije  decir  que  en  lo  de  la  licencia  que  V.  S.* 
pide  para  venir  por  acá  hice  el  oficio  que  me  envió  á  man- 
dar ;  pero  S.  M.  lo  difiere  para  el  tiempo  que  en  su  carta 
dice,  por  parecerle  que  antes  haria  notable  falta  su  perso- 
r^^^  para  estas  cosas  que  se  han  de  proveer ,  y  así  me  pareció 
conociéndolo  yo  mejor  que  nadie ,  que  no  se  le  podía  repli- 
car en  esto.  Lo  que  n^as  pena  me  da  destos  trabajos  es  que 
han  de  estorbar  á  curar  V.  S."  de  su  salud  con  el  funda- 
niento  que  es  menester;  pero  como  negocio  tan  principal, 
debe  y.  S."  mirar  mucho  por  ella,  y  así  se  lo  suplico  yo. 

En  lo  que  toca  á  los  tres  mili  escudos  que  V.  S.  hizo  li- 


407 

brar  al  señor  prior  D.  Hernando  en  cuenta  del  sueldo  que 
hubiese  de  haber ,  no  hay  que  decir  sino  que  yo  previne  á 
S.  M.  de  las  limitaciones  con  que  V.  S.  se  los  hizo  dar ,  y  si 
ordenare  alguna  cosa  sobre  ello,  lo  avisaré  á  V.  S.^  Quedo 
prevenido  de  lo  de  los  quinientos  quintales  de  bizcocho  que 
el  año  pasado  se  dieron  al  señor  Juan  Andrea  de  lo  que  ha- 
bía de  S.  M. ;  pero  todavía  será  bien  que  V.  S/  haga  que 
los  oficiales  de  la  armada  den  la  razón  dello  á  los  del  subsi- 
dio para  que  les  hagan  el  descuento  al  tiempo  del  librar, 
que  al  fenecer  de  la  cuenta  no  me  suelo  yo  hallar  presente. 

Su  Majestad  estuvo  estos  dias  con  unas  tercianas ,  y 
aunque  se  le  quitaron,  le  volvió  anoche  otra  que  nos  tiene  acá 
con  harta  pena,  aunque  placerá  á  Dios  no  le  vuelva  mas. 
La  reina  nuestra  señora,  y  el  príncipe  Ernesto  y  el  señor  don 
Juan  de  Austria,  que  han  pasado  su  trabajo,  están  ya  libres 
del,  y  presto  arrancarán  todos  del  Bosque.  Yo  quedo,  gra- 
cias á  nuestro  Señor,  con  salud ,  y  tan  á  servicio  de  V.  S.* 
como  suelo.  Cuya  muy  lile,  persona  y  estado  guarde  y  acres- 
ciente  Nuestro  Señor  como  desea.  De  Segovia  26  de  setiem- 
bre de  1566. — Besa  las  manos  de  V.  S.  su  servidor. — 
Francisco  de  Eraso. 

Sobre. — Al  muy  Ule.  señor  mi  señor  D.  García  de  To- 
ledo, general  de  la  mar  y  visorey  de  Sicilia ,  etc. 


408 


Copia  de  respuesta  á  D.  García  de  Toledo,  de  minuta  de 
carta  de  S.  M.,  fecha  en  el  Bosque  de  Scgovia  á  26  de 
setiembre  1566. 

A-prueba  los  ofrecimientos  que  en  su  nombre  hizo  á  Su  Santi- 
dad ,  y  sus  esfuerzos  para  proveer  á  la  Goleta— Envío  de  tropas  á 
Miiau  para  proteger  su  ida  á  Flándes, 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
nüm.  115Ü.) 

Vi  vuestras  cartas  de  2 ,  7  y  20  del  pasado  y  las  copias 
de  los  breves  y  letras  que  Su  Santidad  y  el  comendador  ma- 
yor de  Castilla  en  su  creencia  os  escribieron ,  persuadién- 
doos que  fuésedes  á  Brindez  á  juntaros  con  las  cien  galeras 
que  los  venecianos  han  ofrecido  de  armar  para  combatir  y 
deshacer  la  armada  del  turco,  y  juntamente  he  visto  los 
treslados  de  lo  que  á  todo  les  respondistes ,  que  así  esto 
como  el  haberos  partido  con  las  ochenta  y  cinco  galeras  que 
scribistes  últimamente  y  con  el  intento  que  apuntáis  me  ha 
parecido  bien ,  y  que  no  se  podia  ni  debia  excusar  haciendo 
Su  Santidad  la  instancia  que  en  esto  ha  hecho ,  y  quedando 
lo  de  la  Goleta  y  Malta  tan  seguro  como  decís  con  haber 
tomado  la  dicha  armada  el  camino  que  tomó ,  pues  cuando 
po  se  haya  podido  efectuar  tan  buen  propósito ,  como  lo  ten- 
go por  cierto,  por  las  causas  que  muy  bien  consideráis,  ha- 
brá servido  esta  demostración  para  dar  á  Su  Santidad  con- 
tentamiento y  satisfacción ,  y  inclinarle  mas  á  lo  de  la  con- 
cesión de  las  galeras  y  bulla  de  la  Cruzada;  y  porque  estoy 
con  cuidado  hasta  saber  lo  que  en  todo  se  ha  hecho ,  aun- 
que s^  el  que  vos  tenéis  de  la  conservación  desa  armada  y 
de  que  no  subceda  inconviniente ,  os  encargo  que  con  bre- 


vedad  nos  aviséis  dello  si  cuando  este  despacho  rescibiére- 
des  no  lo  hubiéredes  hecho.  Y  cuanto  á  haber  revocado  la 
orden  que  primero  hablados  dado  á  don  Alvaro  de  Bazan 
para  que  viniese  á  estos  reinos  con  una  banda  de  galeras, 
aunque  fuera  de  gran  importancia  que  hubiera  llegado  acá 
para  los  efectos  que  os  escribí  no  hay  ya  que  tratar  dello. 

En  mucho  servicio  os  tengo  el  cuidado  que  tenéis  de  la 
provisión  de  la  Goleta  y  de  haber  enviado  los  30  mil  du» 
cados  que  escribís  para  la  paga  de  la  gente  que  allí  reside, 
allende  de  lo  que  antes  habíades  proveído ,  y  pues  hay  tan- 
ta necesidad  de  los  gastadores  y  muías  de  carga  que  de 
nuevo  piden  para  la  fortificación  de  aquella  plaza ,  yo  os  en- 
cargo deis  orden  como  se  envíen  con  brevedad ,  y  también 
los  doscientos  soldados  que  apuntáis,  que  esto  es  de  mucha 
utilidad,  así  para  sacar  los  inútiles  como  para  que  la  gente 
que  quedare  esté  con  contentamiento ,  teniendo  esperanza 
de  que  saldrían  de  allí  cuando  lo  quisieren  hacer  y  se  su^ 
friere. 

Agora  se  envían  al  embajador  de  Genova  cédulas  de 
cambio  de  50  mil  ducados  para  la  continuación  de  las  obras 
y  fortificación  desta  plaza:  de  mas  de  lo  que  os  escribo  por 
otra  carta  cerca  desto ,  os  encargo  deis  orden  que  se  pongan 
allá  con  brevedad  y  seguridad  por  que  no  se  pierda  tiempo 
ni  corra  el  sueldo  á  los  oficiales  y  otras  personas  que  ea 
ellas  se  ocupan  sin  trabajar. 

Bien  me  ha  parecido  la  orden  que  disteis  en  que  se  le-- 
vantase  la  caballería  que  escribís  para  guarda  dése  reino ,  y 
así  el  haber  proveído  que  estuviese  á  la  defensa  de  las  tier- 
ras descubiertas  como  se  hizo  el  año  pasado,  y  no  á  las  es^ 
paldas  de  las  tierras  fuertes  como  antes  se  hacia,  á  que  no 
hay  que  replicar ,  sino  que  he  holgado  de  entenderlo. 

Aunque  tengo  por  cierto  que  el  visorey  de  Ñapóles  ha- 


410 

brá  proveído  se  entreguen  á  nuestros  oficiales  los  esclavos 
que  el  conde  de  Altamira  hizo  embestir  en  Pomblin ,  Puer- 
to Hércules  y  Orbitelo  para  que  se  repartan  entre  las  per- 
sonas á  quien  toca  conforme  á  la  instrucción  que  dimos,  to- 
davía se  lo  escribo  con  este  correo  como  lo  pedís  y  os  pa- 
resce. 

Ha  sido  bien  advertirnos  de  los  inconvinientes  que  po- 
dría traer  el  hacer  justicia  de  los  arráeces  que  se  han  toma- 
do y  pendieren  (i)  como  lo  tenemos  proveído ,  y  así  mandare- 
mos platicar  y  proveer  sobrello  lo  que  convenga.  Entretanto 
haréis  questen  á  buen  recaudo  en  la  parte  que  os  parescie- 
re ,  que  con  brevedad  se  os  avisará  de  lo  que  hubiéredes  de 
hacer  dellos.  Para  los  efectos  que  os  escribí  por  la  carta 
de  XI  de  agosto  he  determinado  que  toda  la  infantería  espa- 
ñola ,  así  del  tercio  de  Ñapóles .  como  la  que  tenéis  en  ese 
reino  y  la  del  tercio  de  Lombardía ,  en  que  se  comprende  la 
extraordinaria  que  había  en  la  Goleta ,  que  según  lo  que  úl- 
timamente escribís  será  hasta  siete  mil  infantes,  ó  los  que 
mas  hubiere ,  se  recojan ,  junten  y  lleven  al  estado  de  Mi- 
lán para  que  allí  se  alojen  y  entretengan ,  como  lo  escribi- 
mos al  duque  de  Alburquerque ,  por  ser  mas  á  propósito 
para  mi  pasaje  en  Flándes ;  y  por  que  lo  desas  partes  que- 
de bien  proveído,  como  es  razón,  habemos  ordenado  que  en 
estos  reinos  se  levanten  luego  otros  siete  mil  hombres  que 
se  enviarán  en  navios  este  invierno  con  toda  la  brevedad 
posible  para  que  entren  y  queden  en  lugar  de  los  viejos  que 
se  sacan ,  en  cada  parte  el  número  ordinario  que  suele  y  ha 
de  haber,  para  lo  cual  bastarán;  pero  por  que  no  conviene 
que  por  esta  causa  se  dilate  la  ejecución  de  lo  sobredicho, 
¡>orquc  este  correo  no  se  despacha  á  olra  cosa ,  os  encargc| 

■       •■;;<( 
..<  (1)  Así. 


411 

que,  sin  perder  tiempo,  deis  orden  que  se  traiga  toda  la  di- 
cha gente  á  Genova  para  que  alli  se  desembarque  y  pase  al 
dicho  estado  de  Milán ,  que  al  visorey  de  Ñapóles  escribo  lo 
que  veréis  por  esa  copia  de  su  carta,  para  que  habiéndole 
vuelto ,  como  lo  tengo  por  cierto ,  la  infantería  que  se  sacó 
este  verano  de  aquel  reino  os  la  torne  á  entregar  sin  poner 
en  ello  ninguna  dificultad  ni  impedimento ;  y  porque  podría 
ser  que  hubiese  licenciado  los  alemanes  que  este  verano  le» 
vantó  y  trujo  alli ,  y  entre  tanto  que  llegan  los  nuevos  es- 
pañoles que  de  acá  han  de  ir  quedaría  lo  de  allí  desproveido, 
nos  ha  parecido  que  de  los  dos  mil  seiscientos  tudescos  que 
hay  en  Lombardía ,  se  lleven  á  Ñapóles  hasta  mil  y  quinien- 
tos, y  así  lo  escribimos  al  dicho  duque  de  Alburquerque  que 
os  los  haga  dar,  (1)  y  que  despida  los  demás  llegada  la 
dicha  ihfanleria  que  vos  habéis  de  llevar.  Encargóos  mu- 
cho qne  luego  los  enviéis  en  las  galeras  que  para  esto  se* 
rán  menester,  á  las  cuales  ordenareis  que  luego  vuelvaa 
á  juntarse  ambos  para  el  efeclo  que  os  habernos  escrito, 
y  pues  deslo  dependerá  lo  que  toca  á  vuestra  venida  por 
acá,  no  hay  que  decir  sino  remitirnos  á  lo  que  os  escribi- 
mos sobrello  últimamente.  Del  Bosque  de  Segovia  á  26  de 
setiembre  1566. 

De  mano  de  S.  M. 

Entretanto  que  esto  se  hace  os  avisaré  de  lo  que  mas 
habrán  de  hacer  las  galeras  conforme  á  lo  que  escribí  el 
otro  dia ,  y  en  esto  conviene  usar  de  la  brevedad  que  podéis 
entender. — Yo  el  Rey. — Francisco  de  Eraso. 

(1)  Lo  de  cursiva  eslá  tachado  en  el  manuscrito. 


412 


Carta  original  de  S.  M.  á  D,  García  de  Toledo,  fecha  en 
el  Bosque  de  Segovia  á  26  de  setiembre  de  1566. 


Dinero  para  la  fortificación  de  la  Goleta ,  y  le  manda  que  la  pro- 
vea de  varias  cosas  necesarias. 


(Archivo  del  Excmo,  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar,  visorey  y  capitán  general  en  el  nuestro  reino  de  Sici- 
lia :  A  Gómez  Suarez  de  Figiieroa  del  nuestro  Consejo  y  nues- 
tro embajador  en  Genova  se  envía  crédito  de  cincuenta  mili 
ducados  para  la  fortificación  de  la  Goleta,  y  le  mandamos 
que  los  tenga  puestos  en  Genova  ó  en  Ñapóles  para  cuando 
vos  enviáredes  en  que  vayan,  como  veréis  por  la  copia  que 
irá  con  esta  de  lo  que  se  le  escribe  sobre  ello,  y  porque  nues- 
tra voluntad  es  que  los  dichos  cincuenta  mili  ducados  vayan 
todos  en  dinero  á  la  dicha  plaza  con  gran  brevedad  y  pres- 
teza, que  es  lo  que  se  pretende  para  que  en  la  obra  se  pon- 
ga la  diligencia  que  conviene,  os  encargamos  que  luego  deis 
orden  en  que  se  lleven  á  ella  por  la  forma  que  os  paresciere 
que  irán  con  mas  presteza,  y  seguridad  y  buen  recabdo  y  sin 
que  se  pierda  hora  de  tiempo;  y  porque  de  aquella  plaza  nos 
escriben  la  falta  que  tienen  de  gastadores,  sin  los  cuales  no 
se  puede  hacer  nada  como  sabéis ,  os  encargamos  proveáis 
que  dése  reino  se  lleven  luego  los  que  faltaren  de  los  tres- 
cientos (]uc  se  os  scribió  que  enviásedes  á  ella  cuando  fué  el 
Fralin,  y  mas  si  mas  se  pudieren  haber,  haciendo  toda  la 


4i3 

diligencia  que  fuere  necesaria  y  se  pudiere  para  que  se  ha- 
llen ,  pues  veis  lo  que  importa  que  en  este  invierno  se  pu- 
siese aquella  plaza  en  defensa ,  y  asimismo  proveeréis  que 
se  lleven  algunas  muías  y  la  cal  que  D.  Alonso  Pimentel  en- 
viare á  pedir  para  la  dicha  fortiQcacion ,  y  también  seis  ó 
ocho  barcas  de  cargo  y  descargo,  que  el  Fralin  nos  escribe 
que  son  muy  necesarias  para  servicio  de  la  dicha  obra ;  y  si 
el  dinero  que  se  envió  á  ese  reino  cuando  fué  el  dicho  Fra- 
tin  para  las  cosas  que  se  habían  de  proveer  para  la  dicha 
fábrica  estuviere  consumido  en  las  que  basta  aquí  se  hobie- 
ren  enviado  para  ella ,  nos  haréis  mucho  placer  en  dar  or- 
den que  se  provea  el  que  fuere  menester  para  cumplirlas, 
sin  tocar  en  los  dichos  cincuenta  mili  ducados ,  avisándonos 
de  lo  que  montare  lo  que  proveyéredes  para  que  mandemos 
que  se  cumpla  del  dinero  que  se  ha  de  enviar  para  la  dicha 
fortificación  demás  de  los  dichos  cincuenta  mili  ducados,  en 
lo  cual  todo  usareis  de  la  diligencia  que  siempre  tenéis  en 
las  cosas  de  nuestro  servicio,  y  avisarnos  heis  de  lo  que  en 
ello  se  hiciere. 

También  nos  escribe  el  dicl>o  Fralin  que  no  se  ha  lleva- 
do razón  de  los  precios  á  como  han  costado  las  vituallas  y 
otras  cosas  que  se  han  enviado  dése  reino  para  la  gente  que 
trabaja  en  la  dicha  fortificación ,  para  saber  al  que  se  les  ha 
de  cargar,  y  porque  para  este  efecto  conviene  que  allá  lo  se- 
pan, ordenareis  que  se  envíe  luego  la  dicha  razón. 

Los  despachos  que  irán  con  esta  para  la  Goleta  haréis 
que  se  envíen  con  el  primer  bajel  que  fuere  á  ella.  De  la 
casa  del  Bosque  de  Segovia  á  xxvi  de  septiembre  de  i  566 
años. — Yo  el  Rey. — Vázquez  de  Salazar. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar ,  visorey  y  capitán  general  en  el  reino  de 
Sicilia. 


iii 


Copia  de  carta  de  S.  M.  al  virey  de  Ñapóles,  fecha  en  el 
Bosque  de  Segovia  á  26  de  setiembre  de  1566. 

Le  agradece  los  servicios  que  prestó  en  la  defensa  del  reino  de 
Ñapóles  cuando  fué  á  él  la  armada  del  turco,  y  los  ofrecimientos  que 
hizo  á  D.  García  de  Toledo  al  pasar  á  Brindis  en  su  persecución — 
Le  previene  que  dé  á  este  los  soldados  que  le  habia  mandado  para 
que  los  lleve  á  Genova. 

(Archivo  del  ExCmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 
El  Rey.    . 

Todas  vuestras  carias  hasta  la  última  de  xxii  del  pasado 
he  rescebido  y  el  contentamiento  que  suelo  del  entender  tan 
á  la  continua  los  designios  y  subcesos  del  armada  del  turco, 
y  particularmente  holgué  de  que  el  daño  que  hizo  en  ese 
reino  este  verano  fuese  tan  poco  como  scribís ,  que  no  se 
podia  esperar  menos  del  cuidado  y  vigilancia  que  ponéis  en 
la  guarda  y  defensa  del ,  por  qué  os  doy  muchas  gracias ,  y 
así  por  el  buen  despacho  y  provisión  que  habéis  enviado  y 
hecho  dar  de  lo  que  ha  sido  menester  para  la  Goleta  y  ga- 
leras del  cargo  de  D.  Alvaro,  y  pues  lo  de  ahí  está  tan  al- 
canzado y  apretado,  tenerse  ha  la  consideración  que  pedís  y 
es  razón  para  relevar  lo  que  se  pueda  destos  gastos ,  aunque 
todo  está  de  manera  que  podréis  creer  se  halla  la  misma  di- 
ficultad en  cualquiera  parte. 

He  visto  lo  que  decís  cerca  de  la  ida  de  D.  García  la 
vuelta  de  Brindez  sobre  quél  nos  escribe  particularmente,  y 
téngoos  en  mucho  servicio  el  ofrescimicnto  de  gente  y  lo  de- 
más que  le  hicistes  para  el  viaje,  y  la  orden  que  enviastes 
al  duque  de  Seminara  para  que  le  enviase  todos  los  avisos 


415 

que  tuviese  de  la  dicha  armada  que  fué  muy  acer  tada .  y 
aunque  tengo  por  cierto  no  se  habrá  podido  efectuar  el  in- 
tento que  llevó,  todavía  espero  el  aviso  de  lo  que  en  todo  se 
ha  hecho. 

Para  cierto  efecto  muy  cumplidero  á  nuestro  servicio  he 
determinado  que  toda  la  infantería  española,  así  del  tercio 
dése  reino,  como  de  los  de  Lombardía  y  Sicilia,  en  que  se 
comprende  la  extraordinaria  que  habia  en  la  Goleta,  que 
toda  tenemos  relación  será  hasta  siete  mil  infantes ,  ó  poco 
mas,  se  recojan ,  junten  y  lleven  al  estado  de  Milán  para  que 
allí  se  alojen  y  entretengan  como  lo  scribimos  al  duque  de 
Alburquerque ,  y  así  enviamos  á  mandar  con  este  correo,  que 
no  se  despacha  á  otra  cosa ,  á  D.  García  de  Toledo  que  sin 
perder  tiempo  dé  orden  como  toda  la  dicha  gente  se  traiga 
á  Genova  para  que  allí  se  desembarque  y  pase  al  dicho  es- 
tado de  Milán.  A  vos  os  encargo  y  mando  que  si  el  dicho  don 
García  os  hubiese  vuelto  cuando  esta  recibáis,  como  lo  tengo 
por  cierto,  la  infantería  que  se  sacó  este  verano  dése  reino, 
se  la  tornéis  á  entregar  luego  como  os  la  pidiere  ó  enviare  á 
pedir  sin  poner  en  ello  ninguna  dificultad  ni  impedimento, 
que  para  que  lo  desas  partes  esté  y  quede  bien  proveído, 
como  es  razón ,  habemos  ordenado  que  en  estos  reinos  se  le- 
vanten luego  otros  siete  mili  hombres,  que  se  enviarán  en 
navios  este  invierno  con  toda  la  brevedad  posible ,  para  que 
entren  y  queden  en  lugar  de  los  viejos  que  se  sacan  en  cada 
parte  el  número  ordinario  que  suele  y  ha  de  haber;  pero 
porque  en  esto  habrá  mas  dilación  de  la  que  conviene  haya 
en  el  juntar  de  la  dicha  gente ,  proveeréis  que  si  los  alema- 
nes que  ahí  han  estado  no  se  hubieren  licenciado ,  ó  ya  que 
se  haya  hecho  estuviesen  tan  cerca  que  podáis  enviar  por 
ellos ,  se  tome  el  número  que  viéredes  ser  menester  para 
la  guarda  de  Gaeta  y  las  otras  plazas  que  os  paresciere ,  y 


416 

donde  no,  avisareis  dello  al  dicho  D.  García,  porque  yo  le 
escribo  que  en  este  caso  habiendo  dejado  en  el  dicho  estado 
de  Milán  los  españoles  que  ha  de  llevar  dése  reino ,  queslo 
no  se  ha  de  dilatar  ni  impedir ,  tome  y  embarque  en  las  ga- 
leras hasta  mili  y  quinientos  tudescos  de  los  que  hay  en  Lom- 
bardía  y  os  los  envíe  con  diligencia.  Ruégeos  que  como  sean 
llegados  hagáis  que  se  pongan  en  tas  plazas  mas  convinien- 
tes  y  que  nos  aviséis  de  lo  que  en  todo  se  hiciere.  Del  Bos- 
que de  Segovia  á  26  de  septiembre  4506  años. 

El  dicho  D.  García  nos  ha  scripto,  que  habiendo  dado 
caza  este  verano  el  conde  de  Altamira  á  algunas  fustas  de 
enemigos,  embistieron  parte  dellas  en  tierra,  y  se  huyeron 
muchos  sclavos  en  Pomplin,  Puerto  Hércules  y  Orbitelo,  y 
aunque  tengo  por  cierto  habréis  proveído  se  entreguen  á 
nuestros  oficiales  para  que  se  repartan  entre  las  personas  á 
quien  loca  conforme  á  la  instrucción  que  sobresté  tenemos 
dada ,  todavía  os  lo  he  querido  encargar  como  lo  hacemos. 

De  mano  del  Rey. 

Con  los  alemanes  y  si  fuese  menester  alguna  compañía 
despañoles  proveeieis  lo  desa  ciudad  y  Gaeta  de  manera  que 
no  pueda  subceder  inconveniente,  y  la  infantería  spañola 
enviareis  luego  á  Lombardía  en  las  galeras,  porque  comie- 
ne  asimismo  á  mi  servicio. — Yo  el  Rey. 

Al  respaldo  se  lee:  Copia  de  la  carta  que  S.  M.  scribió 
al  virey  de  Ñapóles  á  26  de  septiembre  1566  años. 


417 

Carla  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo,  fecha  en 
el  Bosque  de  Segovia  á  50  de  setiembre  de  1566. 

Para  que  mande  pagar  á  D.  Ramón  de  Rocafull  lo  que  se  le 
debe  de  su  salario. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  ca[)itan  general  de  la 
mar,  visorey  y  capitán  general:  Habiendo  venido  aquí  el 
invierno  pasado  D.  Guillermo  de  Rocafull  á  visitar  su  casa  y 
á  poner  en  ella  y  en  todas  sus  Cosas  la  orden  necesaria  de 
que  yo  holgué  mucho ,  entendiendo  la  necesidad  que  tenían 
de  su  presencia ,  por  haber  tanto  tiempo  que  andando  em- 
pleado en  nuestro  servicio  no  había  podido  atender  á  ellas, 
y  habiendo  entendido  que  no  se  ha  podido  desembarazar  en 
el  tiempo  de  la  licencia  que  traía ,  habernos  tenido  por  bien 
de  prorogársela,  como  por  la  presente  se  la  prorogamos,  des- 
del  dia  que  feneció  la  que  vos  le  distes  seis  meses  mas,  y  es 
nuestra  voluntad  que  le  corra  y  haya  de  haber  el  salario  que 
de  nos  tiene  con  las  galeras  de  su  cargo  de  todo  el  dicho 
tiempo,  y  así  os  encargamos  y  mandamos  proveáis  y  deis  or- 
den que  se  le  libre  y  pague  el  dicho  su  salario,  asi  del  tiem- 
po de  la  licencia  que  vos  le  distes ,  como  de  la  prorogacion 
de  los  seis  meses  mas  de  que  por  esta  le  hacemos  merced,  á 
los  términos,  y  plazos  y  del  dinero ,  y  de  la  misma  manera 
que  se  le  libraba  y  pagaba  estando  presente  sirviéndonos  ahí, 
sin  que  haya  falla  ni  se  le  ponga  en  ello  impedimento  algu^ 
no,  que  esta  es  nuestra  voluntad,  teniéndole  muy  encomcn- 
ToMO  XXX.  27 


418 

dado ,  así  en  esto  como  en  lo  que  mas  alií  se  ofresciere  y  le 
tocare  como  á  persona  que  nos  ha  lanto  y  tan  bien  servido. 
Del  Bosque  de  Segovia  á  postrero  de  septiembre  mdlxvi. — ■ 
Yo  el  Rey. — Antonio  Pérez ,  secretario. 

Sobre.  —  Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar,  y  visorey  y  capitán  general  en  el  nues- 
tro reino  de  Sicilia. 


Carta  original  de  D.  Garda  de  Toledo  á  S.M.,  fecha  en 
Palermo  á  23  de  octubre  de  1566. 


Manifiesta  que  ha  dado  las  disposiciones  convenientes  para  la  dis- 
tribución de  las  tropas  conforme  se  le  ha  mandado,  y  para  la  reunión 
de  las  galeras  para  su  ida  á  Flándes. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  1Í50J 

S.  G.  R.  M. 


Habiendo  mas  de  doce  dias  que  estaba  despachado  de 
aquí  y  con  muy  grande  deseo  de  partir  por  ejecutar  lo  que 
V.  M.  me  tiene  mandado ,  fueron  los  tiempos  tan  contrarios 
que  no  pude  embarcarme  hasta  los  18  deste ,  y  estando  para 
levarme  llegó  á  los  19,  dos  horas  antes  del  dia,  el  correo 
de  V.  M.  con  la  carta  de  26  del  pasado ,  respuesta  de  las 
mias  de  2,  7  y  20  de  agosto,  y  á  algunos  cabos  della  tendré 
poco  que  decir  por  esta  causa,  mas  de  que  los  arráeces  se 
tendrán  en  la  custodia  que  V.  M.  manda  hasta  que  ordene 
lo  que  se  habrá  de  hacer  dellos;  y  en  lo  que  toca  á  la  provi- 
sión de  la  Goleta,  para  que  aquella  fortificación  pase  ade- 


lanle  y  se  ponga  en  el  estado  que  se  desea ,  V.  M.  crea  cierto 
que  yo  no  pierdo  un  momento  de  tiempo  en  enviar  todo  lo 
que  de  aquí  se  puede,  como  lo  habrá  visto  por  mis  cartas. 
Y  de  los  cincuenta  mil  ducados  que  agora  provee  V.  M.  para 
la  fábrica  de  allí ,  y  el  embajador  de  Genova  me  escribe  que 
lia  rescibido  las  pólizas  dellos ,  he  procurado  con  algunos 
mercaderes  de  aquí ,  que  por  amistad  á  tal  que  no  se  siga 
interese  á  V.  M.  con  tomallos  para  Genova,  que  me  pres- 
ten hasta  treinta  mil  escudos  para  enviar  á  la  Goleta,  y  me 
los  han  dado  ,  los  cuales  se  les  satisfarán  como  yo  llegue  en 
Genova ,  y  los  veinte  mil  restantes  veré  también  con  la  pre- 
sencia de  enviallos  á  D.  Alonso  por  la  mejor  via  y  menos 
interés  que  se  pudiere,  y  estos  oO  partirán  de  aquí  dentro 
de  pocos  dias,  y  V.  M.  sea  cierta  que  en  lo  que  á  mí  ha  to- 
cado y  toca ,  como  he  dicho ,  no  he  faltado  ni  faltaré  de 
enviar  allí  lo  que  V.  M.  ha  mandado;  y  pues  en  Gerdeña 
no  se  compraron  los  bueyes  ni  las  otras  cosas  que  V.  M. 
ordenó  que  se  en^iasen,  seria  bien  que  V.  M.  mandase  venir 
aquí  el  dinero  que  se  remitió  allá  para  ello ,  para  suplir  lo 
que  de  aquí  se  ha  proveído  y  provee. 

Cuanto  á  lo  que  V.  M.  me  dice  que,  para  los  efectos  que 
me  mandó  escribir  á  los  1 1  de  agosto ,  se  ha  determinado  de 
hacer  que  vayan  á  Lombardía  todos  los  españoles  que  hay 
en  este  reino  y  en  el  de  Ñapóles  ,  y  que  ha  mandado  levan- 
tar allá  hasta  siete  mil  para  enviallos  en  naves ,  porque  el 
reino  de  Ñapóles  y  estos  no  queden  desproveidos ,  y  que  yo 
envíe  luego  los  de  acá  en  galeras  á  Lombardía ,  y  que  entre- 
tanto que  llegan ,  porque  no  quede  lo  de  Ñapóles  despro- 
veído, ordena  al  duque  de  Alburquerque  que  de  los  alema- 
nes que  allí  tiene  dé  rail  y  quinientos  y  que  se  envíen  con 
galeras  á  Ñapóles ;  y  ansí  por  obedescer  y  poner  en  ejecu- 
ción su  mandamiento  como  lo  debo  hacer ,  me  desembarqué 


420 

luego  y  he  dado  orden  para  que  venga  aquí  la  infantería  de 
este  reino  que  habia  enviado  á  alojar  á  las  tierras  de  mari- 
na ,  y  fueran  las  galeras  por  ella ,  si  no  que  el  tiempo  se  ha 
gastado ,  y  por  esto  es  fuerza  que  vengan  por  tierra.  Creo 
que  serán  aquí  dentro  de  seis  ó  siete  días ,  y  á  la  hora  que 
el  tiempo  me  lo  concediere ,  rae  partiré  con  todos  en  segui- 
miento del  viaje ,  y  porque  no  se  pierda  cualquiera  que  se 
pueda  ganar  por  estar  tan  adelante  escribo  al  virey  de  Ña- 
póles que  conforme  á  lo  que  V.  M.  le  ha  ordenado  haga  em- 
barcar en  las  galeras  de  aquel  reino  la  mas  infantería  que 
se  pudiere,  y  á  D.  Sancho  digo  que  se  parta  luego  con  ella, 
y  la  lleve  á  Puerto  Hércules ,  Orbilelo  y  Pomblin ,  y  que  allí 
la  deje.  Y  escribo  al  principe  de  Florencia  que  envíe  luego 
allí  sus  galeras  para  que  la  tornen  y  la  lleven  á  la  Especie, 
y  á  D.  Sancho  escribo  que  se  vuelva  luego  á  Ñapóles  á  to- 
mar la  que  habrá  quedado,  y  que  se  vaya  con  ella  derecho 
á  la  Especie  y  que  allí  me  aguarde  ó  en  Genova  ,  pues  no 
hay  cuantidad  de  galeras  para  llevarla  toda  juncta,  y  este  es 
el  mas  breve  expediente  que  se  puede  tomar.  Y  escribo  al 
duque  de  Alburquerque  como  esta  infantería  será  allí  para 
que  envíe  los  comisarios  que  la  conduzcan  y  alojen  á  donde 
mejor  le  parescerá  como  Y.  M.  se  lo  escribe,  y  advierto  de 
lo  mismo  al  embajador  Figueroa  que  tenga  los  comisarios  en 
orden  para  guialla  por  el  ginovesado  y  para  que  los  mil  y 
quinientos  alemanes  puedan  venir  con  mas  brevedad ,  y  no 
diferirlo  hasta  mi  llegada.  Escribo  también  al  duque  de  Al- 
burquerque que  los  encamine  á  Genova,  y  á  Juan  Andrea 
Doria,  que  los  tome,  embarque  y  traiga  en  sus  galeras  hasta 
Ñapóles ,  que  esto  me  ha  parecido  lo  mejor ,  y  que  con  mas 
brevedad  se  puede  efectuar  según  está  el  invierno  adelante. 
Plega  á  Nuestro  Señor  que  los  tiempos  sean  tan  buenos  y 
acomodados  como  se  debe  desear  para  que  esto  se  efectúo  y 


421 

V.  M.  pase  con  la  seguridad  que  yo  deseo,  á  quien  certifico 
que  por  mi  parte  no  se  ha  perdido  ni  perderá  hora  de  tiempo 
en  ejecutar  lo  que  se  me  lia  mandado ,  y  si  las  cosas  de  Flán- 
des  lo  sufrieran  ó  sufriesen ,  suplicarla  humilmente  á  V.  M. 
que  no  navegase  en  tiempos  tan  peligrosos ;  y  si  por  caso 
esto  se  hubiese  de  alargar  hasta  el  marzo,  suplico  á  V.  M. 
me  lo  mande  luego  avisar,  porque  demás  del  gasto  que  se 
hace  con  las  galeras  en  entretener  la  gente  dellas  y  otras 
particularidades ,  es  destruir  la  armada  de  V.  M.  traerla  na- 
vegando en  semejantes  tiempos.  Suplico  á  V.  M.  me  mande 
avisar  qué  se  ha  de  hacer  á^  la«gente  que  fué  á  Cerdeña, 
porque  creo  que  presuponiendo  V.  M.  que  la  hubiese  tomado 
el  virey  de  Ñapóles,  no  me  ha  mandado  escribir  nada  sobre 
ella.  Nuestro  Señor  guarde  la  vida  de  V.  M.  por  muy  largos 
años  como  la  cristiandad  ha  menester.  De  Palermo  á  25  de 
octubre  1566. — Criado  y  vasallo  de  V.  M.  que  sus  reales 
pies  y  manos  besa. — D.  García  de  Toledo. 

S.  M.—Eraso:      [      Haced  que  se  junten  aquí  luego  ma- 
ñana de  mañana  y  que  vean  estas  car- 
tas y  lo  que  se  debe  de  responder  á 
En  la  carpeta  de  /    n  • 

mano  del  Rev  dice :     \  ^"^^ '  P^^^  ^"®  ^^  ^^^^  ^°"  ®^*®  ^^^' 
reo  que  se  despacha  agora  á  Itaüa ;  y 

si  hobiere  alguna  otra  cosa,  también 
haced  que  se  responda  con  él. 

Sobrede  la  caria.  —  A  la  S.  C.  R.  M.  del  Rey  nuestro 
señor ,  en  manos  del  secretario  Francisco  de  Erase. 


4i22 

Carta  orujiml  de  S,  3/.  á  D.  Garda  de  Toledo ,  fecha  en 
Madrid  á  27  de  noviembre  de  156G. 

Manda  entregar  á  Mos  de  Leni  las  seis  piezas  de  artillería  que 
prestó  el  duque  de  Saboya  el  verano  pasado  para  su  real  servicio. 

f Archivo  4el  Excmo.  Sr,  duque  de  Medtnasidonia.J 
El  Rev, 

Ule.  P.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar ,  visorey  y  capitán  general :  Gómez  Suarez  de  Figue- 
roa,  nuestro  embajador  en  Genova  nos  ha  escripto  que  el 
duque  de  Saboya  mi  primo  hace  grande  instancia  en  que  se 
le  vuelvan  las  seis  piezas  de  artillería  que  prestó  este  verano 
pasado  para  el  servicio  de  nuestras  galeras,  y  porque  es  ra- 
zón que  se  le  vuelvan  y  es  esta  nuestra  voluntad,  os  encar- 
gamos que  en  recibiendo  esta,  si  ya  no  lo  hubiéredes  hecho, 
sin  dilación  ninguna  se  las  volváis  y  entreguéis  á  Mos  de 
Leni ,  ó  á  quien  tuviese  orden  del  dicho  duque  para  cobrar- 
las ,  y  avisarnos  heis  con  el  primero  de  como  se  habrá  cum- 
plido, porque  holgaremos  de  entenderlo.  De  Madrid  á  xxvii 
de  noviembre  mdlxvi.^ — Yo  el  Rey. — Antonio  Pérez. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán 
general  de  la  mar,  visorey  y  capitán  general  en  el  nuestro 
reino  de  Sicilia. 


ic^moüíjat. 


42S 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo ,  fecha  en 
Madrid  á  27  de  noviembre  de  1566. 

Le  habla  de  la  distribución  de  la  infantería ,  y  de  que  no  puede 
pasar  á  Flándes  este  invierno ;  pero  que  eche  voz  de  que  verificará 
este  viaje. 

(Archivo  de  Excmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo  nuestro  visorey :  Vi  vuestra 
carta  de  xxin  de  octubre ,  por  la  cual  he  entendido  que  es- 
tando á  punto  para  partir  con  las  galeras  en  cumplimiento 
de  lo  que  primero  os  habia  escrito  llegó  el  despacho  de  los 
XXVI  de  agosto  sobre  la  embarcación  y  traída  de  los  españo- 
les que  hay  en  este  reino  y  en  Ñapóles  á  Lombardía,  com- 
prendiendo en  estos  los  que  agora  están  en  Cerdeña  que  to- 
vimos  por  cierto  se  bebieran  incorporado  y  metido  en  las 
compañías  y  número  ordinario  que  habia  de  quedar  como  os 
lo  escribimos,  aunque  no  debió  llegar  á  tiempo,  y  hános  pa- 
recido bien  la  orden  que  distes  para  que  la  infantería  dése 
reino  caminase  por  tierra ,  pues  los  tiempos  no  dieron  lugar 
á  que  viniesen  por  mar,  y  seguu  lo  que  cerca  desto  decís 
ya  pienso  que  seréis  en  Genova ,  y  que  lo  mismo  habrá  he- 
cho D.  Sancho  de  Leiva  con  haber  traído  de  Ñapóles  en  el 
primero  y  segundo  viaje  que  le  ordenastes  toda  la  infantería 
española,  que  no  se  podia  dar  mejor  forma  no  habiendo  bas- 
tante recaudo  de  galeras  para  venir  toda  en  una  vez ,  y  las 
de  Juan  Andrea  se  excusarían  de  ir,  pues  no  habia  alema- 
nes que  llevar  de  Ñapóles  ni  el  visorev  los  habia..  v  ha  me- 


m 

nester  según  lo  escribió  al  duque  de  Alburquerque.  Por  la 
infantería  que  está  en  Cerdeña  enviaréis  para  que  se  junte 
con  la  demás  y  no  esté  dividida ,  y  ya  el  embajador  de  Ge- 
nova nos  ha  escrito  que  la  Señoría  proveería  para  el  paso 
de  los  comisarios  y  vituallas  que  fuesen  necesarias  de  muy 
buena  voluntad,  y  lo  mismo  habrá  hecho  el  dicho  duque 
hasta  el  alojamiento  donde  han  destar ,  de  manera  que  espe- 
ro que  en  ninguna  cosa  habrá  falta ,  y  que  en  lo  que  á  vos 
toca  usaréis  de  la  diligencia  que  soléis, 

Agora  es  bien  que  sepáis  que  como  'quiera  que  os  tengo 
avisado  que  he  de  pasar  en  Flándes ,  y  esto  no  se  puede  ni 
debe  excusar  en  ninguna  manera,  así  por  lo  de  la  religión, 
que  es  lo  principal ,  como  por  asentar  y  asegurar  las  cosas 
que  aquellos  Estados  que  siempre  van  empeorando ,  por  ra- 
zón de  las  muchas  que  tengo  que  hacer  en  estos  reinos ,  y 
en  los  de  la  corona  de  Aragón  ,  en  que  voy  entendiendo  con 
diligencia,  no  podré  desembarazarme  ni  poner  á  punto  para 
pasar  en  este  invierno ,  puesto  que  quisiera  mucho  hacerlo, 
especialmente  que  los  caminos  por  donde  puedo  ir  es  el  uno 
por  Alemania,  y  en  este  hay  muchas  dificultades  allende  des- 
tar el  emperador  mi  hermano  ocupado  en  lo  que  sabéis ,  que 
siq  su  presencia  se  podría  mal  hacer ;  y  aunque  no  faltan 
algunas  en  el  otro  de  Saboya,  todavía  habernos  enviado  per- 
sona propia  á  tratarlo  con  el  duque ,  y  visitar  los  pasos  y  mi- 
rar como  y  con  qué  seguridad  y  provisión  de  vituallas  se  po- 
dría hacer ,  y  para  que  en  caso  que  esto  faltase  seria  forzo- 
so tomar  el  de  Frejus  que  es  en  la  Proenza ,  para  que  por  él 
se  llevase  sola  la  infantería ,  que  la  caballería  habría  de  ir 
desde  Lombardía  por  tierra ,  pues  por  uno  deslos  dos  no  se 
|)odria  excusar  pidiendo  paso,  como  se  habría  de  pedir,  al 
icy  de  Francia ,  y  en  esperar  estas  respuestas  y  acomodar 
lo  necesario  po  puede  dejar  de  alargarse  el  tiempo,  por  lodo 


425 

lo  cual  podréis  bien  juzgar  y  considerar  que  ánles  del  vera- 
no no  podríamos  pasar,  pero  conviene  esto.  Importa  mucho 
al  bien  de  los  negocios  que  se  entienda  y  sepa  en  todas  par- 
tes lo  contrario ,  y  que  á  este  propósito  se  vayan  haciendo 
las  demostraciones  necesarias,  y  así  habernos  escrito  y  es- 
cribiremos continuamente  á  nuestros  ministros  pre^iniéndo- 
les  de  nuestra  pasada  en  Italia  con  toda  brevedad ;  pero  vos 
las  habéis  de  hacer  mayores  por  los  términos  y  caminos  que 
os  parecerá,  dando  á  entender  que  habéis  de  venir  luego 
acá  á  llevarme  á  esas  partes ,  y  para  que  vean  que  la  dila- 
ción procede  de  causa  justa  tomareis  por  ocasión  los  tiem- 
pos ó  falta  de  paga  y  vituallas  ó  lo  que  os  ocurriera  y  ve- 
réis ser  mas  á  propósito ,  y  con  hacer  esto  así  os  detenéis  en 
Genova  ó  en  el  Especie  con  hasta  cincuenta  galeras  bien 
armadas  que  bastarán  para  el  un  efeto  y  el  otro,  y  llevar  á 
Frejus  la  dicha  infantería  en  teniendo  otra  orden  nuestra, 
que  se  os  dará  luego  que  estemos  resuello  y  determinado  en 
el  camino  que  se  ha  de  hacer ,  porque  desde  agora  convie- 
ne y  es  forzoso  tener  hecha  y  á  punto  esta  provisión  y  pre- 
vención ,  porque  no  siendo  así  podría  causar  gran  dilación 
é  inconvenientes :  y  las  galeras  que  sobrarán  y  restarán  y  no 
serán  menester  para  el  sobredicho  efeto,  daréis  orden  que 
vayan  á  invernar  donde  os  parescerá  de  la  manera  que  es- 
tén bien  tratadas  y  se  conserven ,  que  no  hay  duda  sino  que 
es  mucho  menester  según  lo  que  este  año  y  los  pasados  han 
trabajado  y  navegado ,  mayormente  siendo  la  mayor  parte 
nuevas;  y  para  la  paga  de  la  infantería  que  se  ha  de  reco- 
ger en  Lombardía ,  y  para  la  caballería  que  se  acrecienta 
mandareis  proveer  recaudo  de  dinero. 

Los  sieto  mili  infantes  habemos  mandado  levantar  y  ele- 
gir y  nombrar  para  ello  treinta  capitanes,  los  cuales  son  ya 
despachados,  y  los  na\íos  y  vitualles  para  su  pasaje  se  po- 


426 

nen  á  punto  é  irán  á  tiempo  dirigidos  los  unos  á  Ñapóles  y 
los  otros  á  Secilia  y  Lombardía  para  que  estas  partes  que- 
den bien  proveidas  y  aseguradas ,  y  con  la  muerte  del  tur- 
co y  quedar  necesariamente  embarazado  su  hijo  en  el  go- 
bierno y  otras  cosas  que  se  ofrescen  al  principio  de  los  rei- 
nados paresce  que  por  el  año  venidero  se  podrá  tener  mas 
quietud  y  sosiego;  y  cerca  desto  nos  avisareis  particular- 
mente de  lo  que  os  ocurrirá  y  os  paresce. 

Los  XV  mil  quintales  de  bizcocho  que  pedis  se  pongan 
en  Barcelona  de  lo  que  se  hizo  el  año  pasado  en  Málaga  y 
Cartagena  se  hará  segund  será  menester. 

En  lo  de  los  L  mil  ducados  que  últimamente  enviamos 
para  la  fortificación  de  la  Goleta,  agradezcoos  mucho  los 
xxK  mil  que  procurastes  haber  en  Secilia  para  enviarlos 
con  mas  brevedad  que  no  puede  dejar  de  ser  útil  y  prove- 
choso, y  os  encargamos  que  los  que  restan  hagáis  lo  mismo, 
y  que  de  lo  que  en  aquella  plaza  se  hobiere  de  hacer  ten- 
gáis especial  cuidado  ordenando  se  provea  todo  lo  necesario 
para  la  continuación  y  brevedad  de  la  fortificación  mayor- 
mente agora  que  tenemos  aviso  que  el  rey  de  Túnez  ha  roto 
la  paz  y  que  no  acude  con  la  cal  ni  otra  cosa  de  lo  que  es 
menester. 

Y  en  lo  del  dinero  que  se  envió  al  visorey  de  Cerdeña 
para  los  bueyes  y  algunos  gastadores ,  pues  no  los  ha  podi- 
do enviar,  tengo  por  bien  gelos  pidáis  y  demandéis,  y  que  los 
hagáis  emplear  en  aquello  que  viésedes  ser  mas  necesario 
para  la  dicha  fortificación ,  en  virtud  de  la  copia  deste  ca- 
pítulo que  le  enviaréis  firmado  de  vuestro  nombre,  que  dán- 
dolos y  entregándolos  á  la  persona  que  le  ordenásedes  con 
carta  de  pago  de  como  los  recibe ,  los  doy  por  bien  dados  y 
entregados  y  por  libres  y  quitos  á  aquellos  á  cuyo  cargo 
están. 


427 

A  lo  demás  que  dos  habéis  escrito  en  las  cartas  de  ij 
y  xvüj  de  setiembre  no  hay  que  responder  por  ser  cosas  pa- 
sadas y  ejecutadas,  sino  que  las  órdenes  que  distes  á  D.  Al- 
varo y  Gil  de  Andrade  está  bien,  y  ya  ha  dias  que  son  lle- 
gados acá  y  van  la  vuelta  de  las  islas  en  seguimiento  de  al- 
gunas fustas  que  andaban  por  alli.  De  Madrid  á  &xvn  de  no^ 
viembre  de  1566. 

De  letra  del  Rey. 

Aquí  se  os  dice  todo  tan  particularmente  que  no  tengé 
yo  mas  que  decir — Yo  el  Rey — Francisco  de  Eraso. 

Sobre:  Al  lile.  D.  García  de  Toledo  nuestro  capitán  ge- 
neral de  la  mar  y  \isorey  de  Sicilia.  £n  sus  manos  propias 
para  que  la  abra  y  lea. 


Carta  original  de  S.  M.  á  D.  Garda  de  Toledo,  fecha  en 
Madrid  á  38  de  octubre  de  1566. 

Le  manda  que  se  detenga  en  GénoTa  con  las  galeras  de  sa  man- 
do hasta  que  reciba  orden  suya. 

(Archivo  del  Excmo.  Sr.  duque  de  Medmasidonia.) 

El  Rey. 

lile.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  capitán  general  de  la 
mar,  visorey  y  capitán  general :  Teniendo  por  cierto  que  en 
el  traer  la  infantería  española  de  Ñapóles  y  Sicilia  á  Genova, 
para  que  de  allí  vaya  á  Lorabardía ,  habréis  usado  de  la  di- 
ligencia que  os  habernos  scripto  y  vos  acostumbráis  poner 
en  las  cosas  de  mi  servicio ,  se  ofrece  agora  solamente  ad- 


428 

vertiros  y  encargaros  que  llegado  que  seáis  á  Genova  os  de- 
tengáis allí  con  todas  las  galeras  que  hubiéredes  traido ,  y 
que  en  ninguna  manera  partáis  de  aquella  ciudad  y  puerto 
hasta  tanto  que  yo  os  envíe  la  orden  de  lo  que  habréis  de 
hacer,  que  será  dentro  de  pocos  dias,  y  si  acaso  vos  no 
hubiéredes  venido  con  las  galeras ,  es  mi  voluntad  que  haga 
lo  mismo  la  persona  á  quien  las  hubiéredes  encomendado, 
porque  así  cumple  á  mi  servicio  y  á  la  dirección  de  mis  co- 
sas y  negocios.  De  Madrid  á  xxviu  de  octubre  mdlxvi. — Yo 
el  Rey. — Gabriel  de  Zayas. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo  nuestro  capitán 
general  de  la  mar,  visorey  y  capitán  general  en  el  nuestro 
reino  de  Sicilia,  y  en  su  ausencia  á  la  persona  que  por  él 
tuviere  el  gobierno  de  nuestras  galeras. 


Carla  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo,  fecha  en 
el  Escorial  á  oi  de  diciembre  de  1566. 


Le  encarga  que  pida  al  reino  de  Sicilia  un  socorro  de  150  ó  200 
mil  escudos  para  gastos  en  la  defensa  de  Malta  y  la  Goleta. 


(Archivo  delExcmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia. ) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo ,  nuestro  visorey  y  capitán  ge- 
neral: Son  tan  notorios  los  gastos  hechos  el  año  pasado,  para 
el  socorro  de  la  isla  de  Malta  y  los  que  se  habrían  de  hacer 
en  el  presente  para  la  resistencia  del  armada  del  turco,  co- 
mún enemigo  de  la  cristiandad ,  que  según  terneis  entendi- 
do se  prepara  y  ha  de  venir  muy  mas  pujante  que  el  vera- 


42^ 

no  pasado ,  que  aunque  quisiéramos  relevar  á  este  nuestro 
reino  y  subditos  del ,  no  vemos  como  se  pueda  excusar  si 
del  no  somos  en  parte  socorridos,  porque  de  las  sumas  gran- 
des que  destos  nuestros  reinos  de  Spaña  se  han  sacado 
quedan  tan  exhaustos,  que  sin  ayudarnos  de  otras  partes 
para  lo  que  de  presente  es  menester ,  seria  imposible  poderlo 
suplir  ni  hacer  las  provisiones  que  son  necesarias  para  la 
resistencia  de  tan  poderoso  enemigo ,  y  porque  por  avisos 
ciertos  se  entiende  (como  ya  sabréis),  que  la  intincion  del 
turco  es  de  tornar  á  venir  sobre  Malla ,  y  paresciéndole  que 
aquella  empresa,  por  quedar  como  quedaron  los  fuertes  tan 
batidos,  será  fácil  de  acabar,  pasar  á  la  expugnación  de  la 
Goleta  y  procurar  de  hacer  otros  mayores  daños  en  la  cris- 
tiandad, para  obviar  á  los  cuales  y  proveer  en  todas  partes 
de  lo  necesario,  converná  juntar  la  mayor  cuantidad  de  di- 
nero que  ser  pudiere ,  nos  ha  parescido  despacharos  este  cor- 
reo para  encargaros  como  por  esta  os  encargamos  y  manda- 
mos que  dando  á  entender  á  los  dése  nuestro  reino ,  por  la 
manera  que  mejor  y  con  mas  brevedad  os  parescerá ,  la  ne- 
cesidad en  que  al  presente  nos  hallamos,  les  signiGqueis 
cuan  grande  la  hay  de  fortificar  luego  la  Goleta  para  poner 
aquella  fuerza  de  una  vez  de  manera  que  adelante  quede  ese 
nuestro  rdno  y  los  demás  libres  de  tan  gran  peso  y  trabajo 
como  seria  si  cada  año  nos  hubiésemos  de  ver  en  este  con- 
flicto, y  que  no  menor  la  hay  de  fortificar  lo  de  Malta,  por 
importar  tanto  la  defensa  y  conservación  de  aquella  isla  para 
la  seguridad  y  guarda  dése  reino ,  siendo  como  es  su  ante- 
muralla por  estar  en  el  sitio  donde  está,  y  no  tener  los  de 
aquella  religión  bastantes  fuerzas  para  guardarlo  y  defender- 
lo de  tan  poderoso  enemigo,  á  cuya  causa  y  particularmente 
por  servicio  de  Dios  y  beneficio  de  la  cristiandad  y  particular 
dése  nuestro  reino,  nos  movimos  el  año  pasado  á  tomar  so- 


450 

bre  nuestros  hombros  un  gasto  tan  grande  y  excesivo  como 
fué  el  que  se  hizo  en  juntar  de  tantas  partes  la  gente  y  armada 
que  fué  necesaria  para  socorrerla ,  y  todo  con  el  dinero  des- 
tos  nuestros  reinos  de  Spaña ,  aunque  le  caia  mas  lejos  que 
á  ese ,  por  excusar  en  cuanto  nos  fuese  posible  de  no  agra- 
varle, y  que  lo  mismo  hiciéramos  cierto  agora  si  lo  pudieran 
mas  sufrir;  pero  porque  como  echada  bien  la  cuenta  serán 
menester  mas  de  un  millón  y  cuatrocientos  mil  ducados,  así 
para  hacer  las  dichas  fortificaciones  como  para  reunir  aque- 
llas plazas  de  la  gente  necesaria  para  su  segundad  y  defensa 
y  obviar  á  tantos  daños,  como  es  tan  eminente,  no  se  pro- 
veyendo con  suma  presteza,  y  esto  sea  imposible  poderse  ha- 
cer sin  que  dése  dicho  reino  seamos  ayudados,  y  represen- 
tándoles finalmente  el  grave  daño  y  molestia  que  se  les  si- 
guiria  si  el  turco  tomase  pié  en  cualquier  de  las  dichas  dos 
plazas,  por  las  continuas  incursiones  con  que  de  allí  serian 
infestados ,  les  pidáis  de  nuestra  parte  que  extraordinaria- 
mente nos  socorran  y  ayuden  con  hasta  ciento  y  cincuenta 
ó  docientos  mil  escudos  para  el  efecto  susodicho  en  los  mas 
breves  plazos  que  fuere  posible,  por  estar  el  tiempo  tan  ade- 
lante, con  certificarles  que  el  servicio  que  en  esta  coyuntura 
nos  harán  será  mucho  mas  señalado  que  nunca,  y  que  si  de 
nuestro  patrimonio  nos  pudiéramos  prevaler  y  aquel  no  es- 
tuviera tan  atenuado  y  consumido  de  las  jornadas  pasadas, 
causadas  por  el  bien  público  y  particular  de  nuestros  reinos 
y  señoríos,  holgáramos  harto  de  relevarles  deste  peso,  y  te- 
niendo por  cierto  que  con  la  afección  y  prontitud  que  este 
reino  se  ha  siempre  señalado  en  todas  nuestras  ocurrencias, 
en  esta  que  es  tan  urgente  y  necesaria  no  ha  de  dejar  de 
acudir  ni  mostrarse  con  menos  voluntad ,  no  habrá  para  que 
usar  de  mayor  encarescimiento,  sino  quedar  enteramente 
confiado  que  con  vuestra  buena  manera  y  dexteridad  se  ob- 


431 

terna  en  eslo  como  en  lo  demás  el  fia  que  se  desea.  Del  Es- 
corial á  último  de  diciembre  mdlxvi. 

De  letra  del  Rey. 

Si  acá  hubiera  forma  para  suplir  lo  que  aquí  se  dice  como 
hubo  el  año  pasado  (aunque  con  harto  trabajo),  no  os  man- 
dara escribir  esto ,  mas  no  habiéndola  no  se  ha  podido  excu- 
sar, y  así  os  encargo  mucho  que  hagáis  questo  se  haga  como 
veisques  menester,  importando  tanto  estas  dos  plazas. — Yo. 
el  Rey. — Vargas.  Ui 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  y 
capitán  general  del  reino  de  Sicilia  y  de  la  mar. 


Carta  original  de  S.  M.  á  D.  García  de  Toledo,  fecha  en 
el  Escorial  á  oi  de  diciembre  de  1566. 

Sobre  el  mismo  asunto. 

(Archivo  delExcmo.  Sr.  duque  de  Medinasidonia.) 

El  Rey. 

Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  y  capitán  ge- 
neral :  Por  la  que  será  con  esta  entenderéis  la  causa  porque 
se  despacha  este  correo ,  y  las  que  allí  se  representan  para 
persuadir  y  mover  á  los  dése  reino  á  que  en  esta  necesidad 
nos  ayuden  y  socorran  con  la  suma  de  dinero  que  allí  veréis, 
y  porque  si  se  hubiese  de  convocar  para  esto  parlamento  se- 
ria de  mucha  dilación,  lo  que  no  se  sufre  en  la  necesidad 
presente,  mirareis  si  seria  mejor  y  de  menos  negociación 


452 

tratarlo  con  algunos  varones  de  los  que  se  hallasen  en  esa 
cibdad  y  en  la  comarca,  vuestros  amigos  y  confidentes  como 
otras  veces  se  ha  hecho ,  lo  cual  os  remithnos  para  que  con 
vuestra  prudencia  y  dexteridad  lo  guiéis  como  mejor  os  pa- 
resciere ,  que  á  este  fin  va  la  carta  en  la  forma  que  veréis, 
para  que  se  la  podáis  mostrar,  y  siguiéndose  el  efecto ,  como 
no  lo  dubdamos ,  en  causa  tan  justificada ,  seremos  servido 
que  desde  luego  miréis  y  tratéis  como  nos  podríamos  valer 
prontamente  de  alguna  parte  del  dinero  para  lo  que  de  pre- 
sente será  necesario  proveer ,  y  nos  aviséis  con  correo  pro- 
pio de  todo,  para  que  conforme  á  ello  se  os  pueda  ordenar 
lo  que  mas  convenga.  Del  Escorial  á  último  de  diciembre 

de  MDLXVI. 

De  letra  del  Bey. 

Y  en  confianza  desto  se  comienzan  á  hacer  las  provisio- 
nes y  prevenciones  que  se  os  escribirá  brevemente. — Yo  el 
Rey. — Vargas. 

Sobre. — Al  Ule.  D.  García  de  Toledo,  nuestro  visorey  y 
capitán  general  del  reino  de  Sicilia  y  de  la  mar. 


.^¡^     DOCUMENTOS  RELATIVOS 

■ '."  '■     -  •  f 

D.  SAIVCHO  DÁVILA,^ 

general  de  Felipe  II, 


s 


Copia  de  la  patente  de  la  tenencia  del  castillo  de  Pavta 
al  capitán  D.  Sancho  de  Avila  (1).  Madrid  24  de  di- 
ciembre de  1562. 


(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  número  H30. — 

Folio  dúj 


Philippus  Dei  gralia  Hispaniarum,  utriusque  SicilisD,  Hie- 
rusalem,  Hungariíc,  Dalmaliae,  Croatia?,  etc.,  Rex,  Archi- 
dux  Auslriae,  Dux  Burgandiíe,  BrabanticC  et  Mediolani,  Co- 
mes Habspurgi,  Flandri»  et  Tirolis,  etc.  Recognoscimus  et 
notum  facimus  tenore  prsesentium  universis  quod  cum  nobis 
compertum  faerit  gubernationem  civitalis  Papige  simul  cum 
praífectura  arcis  ejusdem  obitu  Marchionis  Sigismundi  Aes- 
tensis  vacare,  decrevimus  nec  hoc  pacis  tempore  camera 

(1)  Escribió  su  vida  Gerónimo  Manuel  Dávila  y  San-Vítores,  coa 
el  titulo  de  Hechos  de  Sancho  Dávila.  Valladolid,  1713.  üa  volúmea 
en  i,"  Inserta  varios  documentos. 

Tomo  XXX.  28 


434 

noslra  nimium  gravctur  gubernalioneiii  ipsam  nemini  eon- 
ferre  sed  tantummodo  praefalai  arci  de  aliquo  probo  el  de 
nobis  benemérito  viro  providere,  unde  inler  canteros  qui  se 
nobis  obtulerunt  mentí  nostríE  ocurrit  íidelis  noster  dilectas 
capitaneus  Santius  de  Avila,  cujus  virtus,  prudentia  et  ex- 
perientia  ac  non  vulgaria  servitia  per  eum  variis  in  rebus 
Serenissimo  Carolo  Imperatori  patri  et  domino  meo  felicis  re- 
cordationis  et  nobis  preestita  mérito  nos  inducunt  ad  ipsum 
consliluendum  et  depulandum  in  praefectum  ejusdem  casfri; 
igitur  tenore  prsesentium  de  certa  nostra  scientia ,  animo  de- 
libéralo sanoque  accedente  consilio  ac  ex  gratia  speciali  prae- 
fatum  capitaneum  Santium  de  Avila  castellanum  dicti  castri 
civitatis  Papiae  ad  nostrum  dumtaxat  beneplacilum  facimus, 
constituimus  et  deputamus  cum  auctoritale  el  polestate  om- 
nia  fciciendi  seu  fieri  jubendi,  qiia?  ad  conservalionem  et  uti- 
litatem  praefati  castelli  speclare  videbuntur  ac  cum  praími- 
nentiis,  pra^rogalivis ,  commodis,  ulilitatibus  ac  emolumen- 
tis  dicto  muneri  juste  spectantibus  et  perlinenlibus,  ac  cum 
salario  menstruo  quadraginta  scutorum  singulo  Irimestri 
persolvendo  ea  tamen  lege  ct  conditione  ut  antequam  dicti 
muneris  exercilium  suscipiat  debitum  homagii  et  fideütatis 
juramentum  prestare  teneatur  in  manibus  illustris  guberna- 
toris  prafati  status  mandantes  propterea  eidem  gubernafori 
noslro  praísenti  el  futuro  pra)sidi  et  senatui,  príPsidi  et  qua^s- 
toribus  reddiluum ,  thesaurario  queque  gcnerali  círterisque 
oficiaübus  nostris  quibus  hujusmodi  res  incumbit  ut  dictum 
capitaneum  Santium  de  Avila  in  praídicti  castri  et  pra^fec- 
turge  possesionem  ponant  et  inducant  possitumque  et  in- 
ductum  manuteneant  et  dcfendant,  deque  salario,  emolu- 
menlis  et  alus  pra^diclis  debilis  Icmporibus  respondeant  et 
faveanl,  per  quos  decet  plcnarie  responderi  jubentes  etiara 

miülibus  et  oíTiciariis  praefati  castri  presenlibus  el  fuluris,  ut 

.X/X  omvX 


memóralo  capitaneo  Santio  de  Avila  tamque  castellano  príE- 
fato  pareant  et  obediant,  omnia  alia  faciant  prout  jussu  cas- 
tellanorura  faceré  aut  intentare  praesumant  quovis  colore 
aut  ingenio  aliunde  quaesito  quatenus  gratiam  nostram  caram 
habent  el  praíter  gravissime  nostrae  indignationis  incursum 
alias  penas  nostro  arbitrio  imponendas  cupiunt  evitare.  Ha- 
rura  testimonio  literaruní  manu  nostra  subscriptarum  .et  si- 
gilli  nostri  appensione  munitarum.  Data  in  oppido  nostro  Ma- 
triti  die  24  mensis  decembris  anno  domini  millesimo  quingen- 
tésimo sexagésimo  secundo,  regnorum  autem  noslrorum 
scilicet  Hispaniarum  el  üllerioris  Siciliae  anno  sexto ,  Neapo- 
lis  vero,  Hierusalem  et  aliorum,  octavo.  2 

Provee  V.  M.  al  capitán  Sancho  de  Avila  de  la  tenen- 
cia del  castillo  de  Pavía  que  vacó  por  el  marqués  Sigis- 
mundo de  Aste,  con  cuarenta  escudos  de  salario  al  mes. 


Noticias  sueltas  concernientes  á  Sancho  de  Avila  ó  Dávilat 
de  los  años  de  4567  ó  4570. 

{Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  nüm.  53o) 

En  una  relación  de  los  alojamientos  de  la  infantería  v 
caballería  (en  Flándes),  año  4567,  hay  la  cláusula  si- 
guiente : 

"Las  otras  tres  (coiiipaiíías) ,  dos  de  arcabuceros  á  caballo  y  la 
wde  celadas  de  Sancho  de  Avila,  se  alojaron  en  un  villaje  cinco 
w  leguas  de  Bruselas. " 

En  una  relación  de  la  caballería  tijera  y  arcabuceros  á 
caballo  que  llevó  el  duque  de  Alba  de  Italia  á  Flándes, 
se  dice : 


436 

"  Sancho  Dávila,  capitán  de  las  guardas  del  duque  con  cient 
»>  lanzas  y  cincuenta  arcabuceros.  '* 

Estado  t  legajo  núm.  540. 

En  un  papel  que  dice:  Sumaria  relación  de  lo  que  con- 
tienen las  consultas  y  pareceres  que  el  duque  de  Alba  ha 
enviado  sobre  la  provisión  de  los  gobiernos  y  bandas  de 
Flándes»  encomiendas^  feudos  y  mercedes,  fecha  á  último 
de  enero  de  1569,  1.*  llana  del  pliego  6.°,  que  principia 
*'  Relación  de  las  personas  que  se  señalaron  en  Flándes,  y 
» lo  que  escribe  por  cada  una  dellas  el  duque  "  dice  lo  si- 
guiente : 

"  Paréscele  asimismo  que  es  bien  arraigar  allí  algunos  españoles 
»  de  servicio ,  y  por  agora  nombra  á  tres :  Sancho  de  Avila  en  An- 
"  vers ,  Julián  Romero  en  Hedin  y  Hierónimo  de  Salinas ,  como  está 
"  dicho,  en  Gante ,  con  darles  á  cada  uno  dos  mil  ó  por  lo  menos  mili 
»  y  quinientos  florines  de  renta  perpetua  como  á  los  naturales. " 

Estado,  legajo  núm.  S40. 

En  una  relación  de  los  capitanes  de  infantería  y  caballe- 
ría, hay  otra  que  principia:  '*Las  personas  particulares 
»  que  el  duque  de  Alba  llevó  consigo  esta  jornada  que  hizo 
t  á  Flándes ,  donde  está. " 

"Sancho  Dávila  (1),  castellano  de  Pavía,  á  cuyo  cargo  está  el 
»  castillo  de  Amberes. " 

¡Párrafo  de  minuta  de  carta  de 
S.  M. ,  fecha  en  Talavera  á  22  de 
enero  de  1570,  al  duque  de  Alba. 

"Habido  respeto  á  los  servicios  de  Sancho  de  Avila  y  á 
(1)  Al  margen  dice :  "Está  en  Flándes." 


437 

»  vuestra  intercesión ,  he  tenido  por  bien  de  le  dar  el  hábito 

>  de  Santiago  (1),  como  me  lo  pedís,  aunque  estaba pueslo 
j>  en  cerrar  la  puerta  á  estos  hábitos  por  algunos  dias ;  pero 

>  á  cosas  que  vos  queréis  y  pedís  tan  de  veras ,  no  he  po~ 

>  dido  dejar  de  abrirlas  (2). 

Párrafo  de  carta  del  duque  de 
Estado,  leg.núm.^Ao.\  Alba  al  Rey,  de  29  de  febrero  de 
1570. 

"  Sancho  de  Avila  agradece  el  hábito  que  se  le  ha  dado." 

**Por  la  que  Vuestra  Majestad  ha  hecho  á  Sancho  de  Avila 
»  del  hábito  le  beso  muchas  veces  los  pies,  que  yo  puedo  decir 
»  á  V.  M.  con  verdad  que  es  uno  de  los  hombres  de  mas 
■»  servicio  de  cuantos  tiene  en  sus  Estados,  y  V.  M.^  sea  ser- 
»  vido  de  acordarse  lo  que  cerca  de  su  negocio  le  tengo 
»  acordado. " 


,  ;  (1)  Hábito  de  Santiago  está  subrayado. 

(2)  Lo  de  bastardilla  esbí  entrerenglonado  y  tachado  en  el  ori- 
ginal. 


438 

Car/a  autógrafa  del  maese  de  campo  D.  Sancho  de  Londo- 
ño  al  duque  de  Albur quer que ,  fecha  en  Roermonda  á  26 
de  abril  de  1568. 

Combate  de  Dahlem, 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  538  J 

III."^"  y  ExMO.  Señor: 

El  segundo  día  de  pascua  da  Resureccion  habia  de  pa- 
sarme alojar  de  Liera  á  Malinas  donde  estaban  hechos  los 
cuarteles  para  las  cinco  compañías ,  cuando  me  llegó  orden 
del  duque  para  ir  hacia  Namur  á  procurar  deshacer  una  jun- 
ta de  gente  á  pié  y  á  caballo  que  por  aquella  parte  se  hacia; 
y  llegado  á  tres  luegas  de  Namur  tuve  otra  orden  del  duque 
para  volver  hacia  Mastric,  cerca  del  cual  se  hacia  otra  junta 
mas  de  temer.  Yendo  por  el  camino  salió  á  mi  un  caballero 
paisano  que  me  dijo  como  estaba  acordado  de  acometer  es- 
tos Estados  por  cuatro  partes  para  divertirnos ,  y  que  para 
i  cierto  dia  estaban  conjurados  seis  mili  hombres  dentro  de 
Bruselas,  y  ocho  ú  diez  mil  en  sus  contornos,  que  habian  de 
ofender  la  persona  del  duque ,  y  juntamente  levantarse  gran 
número  de  gente  eu  todas  partes.  Invié  el  gentil  hombre  al 
duque ,  y  á  largas  jornadas  llegué  á  las  puertas  de  Mastric 
á  los  23  de  abril.  Hallé  allí  á  Sancho  de  Avila,  que  con  la 
compañía  de  caballos  de  la  guardia  (1)  y  la  de  NicoloBasti  y 
la  de  arcabuceros  de  Pedro  Montañés  habia  venido  al  mesmo 
efecto,  y  entendiendo  que  los  enemigos  estaban  de  la  otra  par- 

(I)  Del  duque. 


439 

le  de  la  Mosa,  lies  leguas  debajo  de  Maeslric,  sin  esperar  las 
cuatro  corapaflias  que  estaban  en  Tornay ,  ni  la  de  Bilvorde' 
ni  otras  dos  del  tercio  de  Gerdeña  que  el  duque  había  escri-, 
lo  me  inviaba,  concertando  con  Sancho  de  Avila  que  él  con  la 
caballería  ya  dicha  y  el  conde  de  Ebristan,  coronel  de  alema- 
nes, que  está  á  la  guarda  de  Maestric,  con  dos  compañías  de 
cuatro  que  aUí  tiene ,  caminasen  por  de  la  otra  parte  de  la 
Mosa ,  fui  por  la  parte  de  Brabante  á  dejar  mi  bagaje  en  un 
castillejo  una  legua  debajo  de  Maestric ,  por  donde  aquella 
niesma  noche  pasé  en  barcas  la  Mosa ,  y  al  amanescer  de 
los  veinte  y  cuatro  rae  junté  de  la  olra  parte  hacia  Juliers  con 
el  conde  y  Sancho  de  Avila ,  y  con  toda  la  diligencia  posi- 
ble llegamos  al  lugar  donde  se  creía  estar  los  enemigos,  que 
no  habíamos  entendido  haberse  de  allí  levantado,  porque  nin- 
guno del  país  nos  decía  verdad ;  pero  entendiendo  allí  que 
habían  ido  sobre  Ruermouda,  ciudad  en  Güeldres  grande  y 
entre  la  Mosa  y  la  Rura  en  sitio  excelentísimo ,  y  que  la 
habían  tomado  sin  reposar  ni  tomar  aliento ,  caminamos  has- 
ta la  mesma  Ruermonda ,  y  llegando  á  mediodía  hallamos 
que  la  noche  antes  la  habían  combatido  hasta  llegar  á  que- 
marle las  puertas,  y  qucslando  en  punto  de  tomar  la  ciu- 
dad ,  por  tener  gran  parte  en  ella,  y  no  haber  mas  de  una 
compañía  de  alemanes  bajos  á  su  guardia ,  entendiendo  nues- 
tra venida  habían  dejado  la  empresa,  y  rompiendo  una  puen- 
te por  donde  pasando  la  Rura  no  pudiéramos  seguirlos ,  se 
habían  apartado  de  la  Mosa  y  metido  tres  leguas  en  tierra  de 
Cléves,  cabe  una  villa  que  se  llama  Herclesan,  que  es  del 
rey  ,  fuerte  y  bien  artillada ,  pero  sin  guarnición  alguna. 
Fué  menester  desabestíonar  las  puertas  de  Ruermonda  para 
pasar  la  Rura  y  refescar  la  gente  que  la  noche  antes  no  ha- 
bía dormido,  ni  cenado.  Tardóse  en  desabestíonar  la  puerta 
hasta  las  cuatro  de  la  tarde;  estuvimos  alh'  hasta  las  tres  de 


440 

la  mañana  que  tornamos  á  seguir  los  enemigos.  Iba  la  ca- 
ballería en  vanguardia  harto  fatigada  de  las  largas  jornadas, 
la  infantería  en  batalla  y  las  dos  compañías  de  alemanes  en 
retaguardia ,  todos  desconfiados  de  poderlos  alcanzar ,  cuan- 
do Alderete,  criado  de  V.  E.,  me  vino  á  decir  que  habia  en- 
tendido que  todavía  estaban  los  enemigos  cerca  de  Herclans. 
Creyéndolo  yo ,  le  invió  á  decirlo  á  Sancho  de  Avila  y  que 
caminase  cuanto  posible  fuese.  Hízolo  de  manera  que  á  las 
ocho  de  la  mañana  ya  ellos  habian  descubierto  nuestra  ca- 
ballería, y  como  pláticos  escogiendo  una  docena  de  caballos 
de  la  suya,  se  representaron  á  los  nuestros.  Sancho  de  Avila 
con  liasta  cincuenta  les  dio  la  carga  antes  de  haber  descu- 
bierto su  escuadrón;  pero  viendo  que  por  llevar  caballos  des- 
cansados se  alargaban ,  dejando  muertos  mas  de  doscientos 
peones  que  andaban  desmandados ,  dio  la  vuelta  y  juntán- 
dose con  los  demás  caballos  de  Pedro  Montañés  y  Nioolo 
Bastí,  y  con  el  conde  de  Ebristan  que  traía  hasta  cuarenta 
herreruelos,  descubriendo  el  escuadrón  de  los  enemigos,  que 
muy  bien  formado  y  en  orden  se  llegaba  á  una  villa  del  du- 
que de  Cléves,  llamada  Dalen,  á  una  legua  de  Herquelans, 
comenzó  nuestra  arcabucería  de  caballo  á  escaramuzar  con 
ellos ,  y  aunque  el  pais  era  fuerte  de  setos  y  fosos  y  de  bos- 
quecillos,  Sancho  de  Avila  los  molestó  de  manera  que  su 
caballería  dellos  los  desamparó  y  se  puso  en  huida.  Salvá- 
ronse los  que  tenían  buenos  caballos  y  mas  descansados  que 
los  nuestros;  pero  de  ciento  y  cincuenta  que  debían  ser,  los 
mas  fueron  alcanzados  y  muertos  con  mas  de  trecientos  in- 
fantes que  de  miedo  dejaron  el  escuadrón ,  el  cual  se  acogió 
á  los  fosos  de  Dalen  donde  nuestra  caballería  los  cercó ,  es- 
perando á  la  infantería  que  por  no  saber  lo  que  habia  suce- 
dido estuvo  mas  de  dos  horas  hecha  alto ,  y  aunque  en  este 
medio  dievon  en  ella  algunos  de  los  que  se  habian  escapado 


444 

de  la  caballería,  de  ninguno  se  pudo  entender  mas  de  que 
rotos  se  habían  escapado  por  aquellos  bosques:  hice  entrar 
docientos  arcabuceros  á  caza  dellos ,  y  hallando  hasta  dos- 
cientos los  mataron.  Serian  las  dos  después  de  mediodía 
cuando  supe  que  el  escuadrón  se  había  recogido  al  foso  de 
Dalen ,  y  llegando  con  toda  presteza  di  orden  que  la  arcabu- 
cería escaramuzando  los  acometiese  por  tres  partes  hasta 
encerrarlos  en  el  foso,  y  que  entonces  si  necesario  fuese, 
arremetiesen  los  coseletes  por  un  camino  harto  cubierto  y 
seguro ;  pero  como  todos  traían  tanta  gana  de  verse  á  las 
manos  con  ellos,  antes  que  los  arcabuceros  comenzasen  la 
escaramuza,  de  mas  de  quinientos  pasos  arremetieron   las 
banderas  y  coseletes  con  tal  ímpetu  y  aliento  como  si  salie- 
ran del  alojamiento  á  combatir  un  castillo  de  burlas,  y  sia 
parar  se  arrojaron  dentro  del  foso,  que  por  muchas  partes 
tenia  diez  palmos  de  agua  demás  de  la  resistencia  de  mil  y 
mas  enemigos  que  de  una  duba  que  entre  dos  fosos  había, 
y  de  unos  torrenes  fsicj,  donde  con  ayuda  de  los  vecinos  de 
Dalen  habían  podido  entrar  algunos,  combatieron  mas  de 
una  hora  ayudados  muy  bien  de  nuestra  arcabucería  que 
luego  llegó;  en  fin,  muertos  en  el  foso  mas  de  ochocientos 
dellos,  se  entró  por  escalas  la  tierra,  y  sin  hacer  daño  á  per- 
sona della,  obedesciendo  á  un  bando  que  hice  echar  antes  de 
arremeter,  porque  no  se  siguiese  alguna  desorden  de  que  el 
duque  de  Gléves  pudiese  quejarse ;  pero  habiendo  requerido 
á  los  vecinos  me  diesen  todos  los  que  dentro  tenían ,  se  ha- 
llaron mas  de  doscientos,  de  los  cuales  se  sacaron  sesenta  vi- 
vos, que  los  demás  no  fué  posible  salvarlos  de  la  furia  de 
los  soldados ,  cuyos  amigos  habían  sido  muertos  y  heridos, 
que  no  pudo  ser  tan  sin  sangre  de  nuestra  parte  que  no  mu- 
riesen de  las  cinco  compañías  doce ,  y  saliesen  heridos  trein- 
ta y  siete  de  los  mas  granados,  y  los  mas  de  los  heridos  lie- 


442 

ncn  á  (los  y  á  tres  arcabuzazos.  En  suma  puedo  con  verdad 
decir  que  de  cuantos  capitanes  y  soldados  se  han  hallado 
esta  jornada ,  ninguno  ha  dejado  de  hacer  mas  de  lo  que  era 
obligado.  Francisco  de  Valdés  hizo  muy  bien  el  oficio  de  sar- 
gento mayor  y  de  capitán,  ordenando  fuera  y  combatiendo 
dentro  del  foso.  D.  Diego  de  Carvajal  combatió  bien  como 
capitán  de  arcabuceros,  teniendo  á  su  lado  á  D.  Fernando 
su  hermano  herido  de  dos  arcabuzazos.  Don  Francisco  de 
Vargas  peleando  dentro  del  foso  fué  herido  de  dos  arcabuza- 
zos, uno  en  el  rostro.  Don  Alonso  su  hermano  se  halló  con 
Sancho  de  Avila  á  todo  lo  de  antes  y  después  á  pelear  en  el 
foso  y  dentro  del  lugar  á  excusar  desorden :  los  alféreces  hi- 
cieron mucho  mas  del  que  eran  obligados ,  y  todos  los  sol- 
dados maravillas.  En  fin,  si  alguna  falta  hubo  fué  de  mí 
solo  que  no  pude  guiar  mi  gente  al  foso  por  hallarme  de 
manera  que  ni  á  pié  ni  á  caballo  pude  hacer  mas  de  dar  or- 
den ;  pero  si  ella  se  observara ,  no  me  costara  tanta  sangre 
de  amigos ,  bien  que  todos  se  maravillan  de  como  no  costó 
mucha  mas;  mas  Dios,  á  quien  se  deben  las  gracias  de  todo, 
lo  hizo  como  fué  servido.  A  los  alemanes  de  Ebristan  no  con- 
sentí que  arremetiesen ,  porque  á  vueltas  de  los  enemigos  no 
muriesen  algunos.  Fué  esto  domingo  de  Cuasimodo,  dia  de 
San  Marcos ,  y  volví  á  dormir  á  Herclans ,  de  donde  el  conde 
de  Ebristan  y  Sancho  de  Avila  tomaron  la  via  de  Maestric, 
y  yo  con  las  cinco  banderas  vine  ayer  á  dormir  á  Roermon- 
da ,  por  dar  recaudo  á  los  heridos  y  por  parescerme  puesto 
á  propósito  para  acudir  á  todas  partes ,  que  según  entendí 
una  hora  antes  de  la  batalla  ó  asalto ,  de  la  otra  parte  del 
Rin  hay  gran  número  de  caballería,  y  en  lo  bajo  de  Güel- 
dres  mucha  infantería ,  mas  no  quise  decirlo  por  no  desani- 
mar la  gente,  hallándome  tan  engolfado.  Afirman  lo  mesmo 
después  de  llegado  aquí;  pero  no  debe  ser  verdad,  pues  el 


445 

duque  no  rae  lo  escribe.  Anoche  recibí  carta  suya  diciendo 
que  me  invía  las  otras  cinco  compañías  del  tercio  y  dos  del 
de  D.  Gonzalo  para  el  efecto  que  Dios  haya  hecho.  No  ten-» 
go  lugar  de  especificarlo  mas,  ni  de  trasladar  esta  por  iuviar 
al  duque  otros  avisos  con  Alderete,  que  en  todo  se  ha  por^ 
lado  como  criado  de  V.  Ex.^  Cuya  111.™^  y  Ex."^  persona 
guarde  y  feüscile  Nuestro  Señor  como  los  servidores  de 
V.  Ex.*  deseamos.  De  Roermonda  á  26  de  abril  1568, 

Yo  aseguro  que  de  los  diez  y  nueve  de  abril  acá  pasan  de 
sesenta  leguas  españolas  las  que  esta  gente  ha  caminado. 
—111."°  y  Ex.»""  Sr.— Besa  las  111.""^*  manos  de  Y.  Ex\  su 
servidor. — Don  Sancho  de  Londoño. 

Sobre  de  la  carta. — Al  111."°  y  Ex."°  señor  el  duque  de 
Alburquerque  ,  etc. ,  capitán  (1)  y  lugarteniente  de 
su  Italia ,  mi  señor.  iy;> 

Carta  original  del  duque  de  Alba  á  S.  M.,  fecha  de  Ye- 
mecen  22  de  julio  1568. 

Batalla  de  Yemecon. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado ,  legajo 
núm.  oSd.) 

S.  C.  R.  M. 

Como  la  sancta  intención  de  V.  M.  es  la  mesma  por  qué 
Dios  fué  servido  de  dalle  la  vitoria  que  le  escribí  á  los  15 
deste  contra  sus  rebeldes  y  los  de  V.  M.,  así  él  no  se  ha  mu- 

(1)  Faltan  las  palabras  de  estos  dos  huecos. 


444 

dado  de  hacelle  la  merced  que  le  hizo  entonces,  tanto  mas 
cumplida  cuanto  por  lo  que  aquí  diré  V.  M.  podrá  entender, 
y  mas  particularmente  del  castellano  Andrés  de  Salazar,  á 
quien  he  querido  enviar  para  que  V.  M.  sepa  todas  las  par- 
ticularidades que  fuere  servido  saber  de  hombre  que  desde 
el  principio  ha  puesto  la  mano  en  todas  ellas  tan  bien  pues- 
ta que  merece  muy  bien  que  yo  diga  esto  del,  y  que  V.  M. 
le  haga  mucha  merced,  juntamente  con  otros  que  abajo 
diré.  Desde  Schlotren  escrebí  á  V.  M.  como  venia  en  busca 
de  los  enemigos ,  los  cuales  tuve  aviso  que  en  tres  dias  ha- 
bían venido  aquí  á  rehacerse  de  gente  que  les  venia  de  so- 
corro ,  tanto  de  infantería  como  de  caballería ,  que  yo  no 
puedo  pensar  sino  que  de  la  tierra  les  nacían  los  socorros, 
porque  V.  M.  sea  cierto  que  tenían  ayer  debajo  de  24  ban- 
deras doce  mili  infantes,  aunque  ellos  pagaban  15  mil ,  de- 
jado la  que  pudieran  tener  de  los  vasallos  deste  conde  de 
Embden ,  si  la  quisieran ,  aunque  esta  fuera  ruin ,  y  quinien- 
tos caballos  que  les  habían  llegado  con  un  hijo  del  obispo  de 
Brome.  Viniéronse  á  poner  aquí  las  espaldas  al  rioEms,  en 
un  alojamiento  tan  fuerte  por  los  fosos  y  canales  que  tenían 
delante,  y  por  podelle  con  las  mareas  empantanar  todo,  que 
cierto  era  sitio  para  dubdar  quien  quiera  mucho  de  empren- 
derlo :  tenían  sus  vituallas  todas  en  sus  espaldas  por  la  ri- 
bera en  muchos  navios  que  iban  y  venían  de  Embden ,  y 
desta  manera  querían  esperar  el  socorro  que  decían  les  ve- 
nia del  príncipe  de  Orange,  que  V.  M.  podrá  ver  por  los 
avisos  que  tengo  que  van  con  esta. 

Habiendo  yo  entendido  el  esfuerzo  que  habían  hecho  des- 
pués de  la  rota  de  Gronínge,  saH  de  Schloteren  á  los  19,  y 
vine  á  alojar  á  Bedel,  el  castillo  de  Aramberghe,  que  ellos  al 
principio  habían  tomado ,  el  cual  habían  comenzado  á  fortifi- 
car, y  fortificación  de  veras,  tres  leguas  de  las  de  por  aquí 


545 

de  camino,  que  son  mucho  mayores  que  las  de  Alemania. 
Aquella  noche  á  las  tres,  después  de  media  noche,  partí  de 
allí  y  vine  á  alojar  otras  tres  leguas  de  Arra  y  Plem ,  villaje 
del  obispo  de  Monster,  ribera  del  mismo  rio  Ems,  y  aloje  tem- 
prano ,  porque  en  habiendo  tomado  aquel  alojamiento  los 
tuve  por  metidos  en  un  saco  por  ser  aquel  el  paso  que  forzo- 
samente habian  de  hacer  para  escaparse,  por  tener  un  puente.* 
Hice  hacer  luego  un  reducto,  y  dejé  buena  guardia  en  él. 
Envié  á  Chapin  Vitelli  á  reconocer  el  campo  de  los  enemi- 
gos ,  por  ser  el  pais  como  tengo  dicho ,  con  caballos  no  se 
pudo  llegar  á  él ;  pero  por  espías  que  me  vinieron ,  y  dos 
soldados  que  se  tomaron  de  su  campo ,  se  entendió  estaban 
donde  tengo  dicho.  A  los  21  al  alba  partí  con  el  campo  á 
buscar  los  enemigos ;  habiendo  caminado  dos  leguas  envié 
con  treinta  arcabuceros  á  caballo  á  Sancho  de  Avila  para 
que  me  tomase  lengua;  trújomela  á  tiempo  que  yo  estaba  con 
el  ejército  á  vista  de  este  casar,  donde  ellos  estaban  en  la 
forma  que  tengo  dicha ,  y  yo  andaba  reconociendo  el  país 
para  ver  por  donde  podríamos  llegar  á  las  manos  con  ellos. 
Reconocido  esto  envié  al  dicho  Sancho  de  Avila  con  el  capi- 
tán Montero  y  sus  arcabuceros  de  á  caballo,  para  que  co- 
menzasen á  escaramucear  y  tentar  los  enemigos.  Luego  tras 
él  envié  al  maestro  de  campo  Julián  con  500  arcabuceros 
y  300  mosqueteros ,  y  luego  hice  que  siguiesen  el  maestro 
de  campo  D.  Sancho  de  Londoño  con  1000  arcabuceros,  y 
hice  mejorar  á  D.  César  y  al  conde  Curcio  con  sus  dos  com- 
pañías que  viniesen  á  mis  espaldas ,  y  el  resto  de  la  infan- 
tería española  dejé  encomendada  á  Alonso  de  Ulloa  y  don 
Gonzalo  de  Bracamente,  con  orden  que  sin  tener  la  mia  por 
hombre  conocido  no  se  moviesen,  y  á  las  espaldas  de  la  in- 
fantería española  venían  seis  banderas  de  Ebrestain ,  por- 
que una  habia  quedado  de  retaguardia  del  bagaje  y  en  el 


446 

fuerte  que  tengo  dicho :  tras  esto  venia  la  caballería  lijera 
y  Hans  Bcrnar ,  y  dijo  que  venian  los  unos  tras  los  otros, 
porque  venian  por  un  dique  estrecho  algunas  veces  y  otras 
que  cabrían  nueve  infantes  de  frente ,  sin  poder  salir  á  un 
cabo  ni  otro  por  los  dichos  canales.  Los  que  tengo  dichos  que 
envié  delante  toparon  gente  suelta  de  los  enemigos ,  gran 
rato  delante  de  su  alojamiento  guardando  algunos  pasos  y 
puentes ,  los  cuales  todos  fueron  ganados  rebotándolos  hasta 
su  plaza  de  arma ,  donde  tenian  puesta  su  artillería ,  y  de- 
tras della  dos  grandes  escuadrones  de  piquería ,  y  tan  bien 
armados,  como  adelante  diré,  y  otro  de  caballería:  allí  la 
gente  suelta  de  los  enemigos  se  rehizo,  y  con  el  arcabucería 
fresca  que  la  recogió  hicieron  gran  resistencia.  Los  maes- 
tros de  campo  me  enviaron  á  decir  que  les  enviase  picas:  yo 
les  respondí  que  ellos  hiciesen  lo  que  pudiesen  que  las  picas 
no  se  las  quería  enviar  por  entonces.  Yo  pretendí  siempre 
romperlos,  no  solamente  sin  aventurar  jornada,  pero  aun  sin 
pérdida  de  gente,  lo  cual  después  visto  el  término  que  está- 
bamos tuve  por  cierta  la  victoria  á  peor  librar,  pero  con  al- 
guna pérdida  de  la  gente  que  estaba  ya  con  ellos  á  las  ma- 
nos. Déjelo  ir  adelante  sin  quererles  dar  las  picas,  echando 
mi  cuenta  que  si  ellos  bastaban  para  romperlos  que  lo  ha- 
rían ,  y  si  los  forzasen  á  retirar  que  vendrían  á  la  carga  los 
enemigos  tan  desordenados  que  hallando  la  piquería  españo- 
la y  arcabucería  que  con  ellos  estaba  con  el  escuadrón  y  or- 
den que  allí  se  podría  tener,  viniendo  ellos  en  desorden, 
como  habían  de  venir,  siguiendo  los  cargados,  fácilmente  y 
sin  aventura  ninguna  se  ganaba  la  victoria ,  y  cuando  esto 
faltara,  que  no  podía  faltar,  llegaban  las  seis  banderas  de 
Ebrestain  en  orden  á  socorrer  contra  gente  desordenada],  y 
tras  ellos  el  refuerzo  de  los  valones ,  y  tras  ellos  la  caballe- 
ría ;  á  lo  cual  lodo  ni  á  la  primera  parte  no  bastaban  á  re- 


447 

sislir  por  la  orden  en  que  estábamos.  Tornándome  á  apre- 
tar por  picas,  hice  pasar  delante  de  un  casar  cerca  de  donde 
combatían  á  D.  César  y  al  conde  Gurcio,  y  el  casar  que  esta- 
ba sobre  el  mesmo  dique ,  y  hice  guarnecer  el  dicho  casar, 
mandando  á  D.  Félix  de  Guzman  se  pusiese  allí  con  500  ar- 
cabuceros ,  porque  pudiesen  recoger  á  los  nuestros  si  se  re- 
tirasen, y  hacer  espaldas  á  las  dos  compañías  de  caballos. 
Estando  en  estos  términos  vi  comenzar  á  crecer  el  agua  de 
los  fosos ,  y  comenzar  á  verter  por  los  prados  y  tierras  de  la 
campaña,  y  armarse  un  nublado  tan  grande  que  parecía  que- 
rerse venir  el  cielo  abajo  con  agua ,  las  cuales  dos  cosas  me 
hicieron  resolver  á  querer  acabar  presto  la  contienda.  La 
primera  de  los  fosos ,  temiendo  que  me  harían  retirar  mal  que 
me  pesase,  y  que  los  soldados  podrían  mal  combatir  con  el 
agua  á  la  cinta ,  y  que  si  me  retiraba  no  podía  alojar  sino 
media  legua  grande  de  su  alojamiento,  y  que  no  tenía  otro 
remedio  que  echarlos  del  casar  para  alojar  en  su  alojamien- 
to. La  segunda  del  nublado ,  que  no  teniendo  allá  sino  arca- 
bucería quedaría  furtil  fsicj.  Por  estas  razones  mandé  al  prior 
fuese  á  hacer  marchar  todos  los  escuadrones ,  y  yo  caminé 
adelante ,  donde  le  había  de  aguardar  para  proveer  á  cual- 
quier desorden  que  á  la  gente  que  estaba  combatiendo  pu- 
diese subceder.  Habíase  comenzado  á  combatir  á  las  diez  de 
la  mañana ,  y  esto  era  á  la  una  y  medía  después  del  medio- 
día, á  la  cual  hora  viniendo  el  prior  con  todos  los  escuadro- 
nes, los  soldados  de  V.  M.  hicieron  tan  grande  esfuerzo,  y 
no  visto  jamás,  que  saltaron  en  la  trinchea  del  artillería  y  la 
ganaron ,  y  no  contentándose  con  esto  embistieron  los  escua- 
drones ,  habiendo  con  el  arcabucería  y  mosquetería  hedió- 
les grandísimo  daño,  tanto  en  el  de  la  caballería,  como  en 
los  de  infantería ,  á  todos  hicieron  volver  las  espaldas ,  y  se 
comenzó  el  alcance  á  la  hora  dicha ,  siguiendo  asimismo  las 


448    • 

dos  compañías  de  caballos  y  otra  mucha  gente  suelta  que 
acudió:  siguióse  con  tan  gran  furia  que  la  campaña  mostraba 
bien  en  los  muertos  la  voluntad  con  que  los  ejecutaba ,  y  tan 
gran  cantidad  de  armas  como  se  halló  ser  tan  bien  armada 
su  gente  cuanto  yo  la  he  visto  después  que  veo  soldados. 
Siguióse  el  alcance  tan  lejos  que  á  la  hora  que  esta  se  escri- 
be, que  son  las  cuatro  de  la  tarde,  no  han  vuelto  de  allá 
muchos  soldados,  los  que  menos  siguieron  fué  cuatro  le- 
guas. Yo,  de  dos  que  pude  seguir,  soy  testigo  de  haber 
visto  la  campaña  de  la  manera  que  digo  á  V.  M.;  pero 
me  dicen  todos  que  de  allí  adelante  habia  sido  la  gran  mor- 
tandad. Juzgan  todos  gran  número;  pero  los  que  se  atientan 
mas  dicen  que  pasan  de  siete  mili  los  muertos  y  ahogados: 
de  los  de  V.  M.,  de  todas  naciones,  son  muertos  hasta  7  ó 
8,  y  heridos  otros  tantos.  Fué  entre  los  muertos  y  el  prime- 
ro D.  Gabril  Manrique ,  que  me  ha  dolido  en  el  alma;  pero 
desde  que  yo  le  veo  en  estas  cosas  sabia  que  habia  de  parar 
en  esto  según  las  partes  en  donde  se  ponia,  que  nunca  fui 
poderoso  para  apartarle  dello,  y  aquel  dia  le  di  tres  ó  cua- 
tro comisiones  para  apartarle  y  no  me  valió.  Hánse  ganado 
deciseis  piezas  de  artillería ,  que  eran  las  que  hablan  relira- 
do  de  Groninghen  el  dia  que  allí  se  les  dio  aquella  rota  por 
la  mañana ,  y  otras  que  habian  habido  no  sé  si  de  Embden 
ó  de  donde.  Ganáronse  las  banderas  todas ,  fuera  cuatro  que 
echaron  en  el  rio :  han  muerto  muchos  gentiles  hombres  de 
los  foragidos  de  Flándes,  no  sé  si  podré  enviar  con  este  á 
V.  M.  la  memoria  de  sus  nombres.  Al  conde  Ludovico  vie- 
ron llegar  á  la  ribera  dos  leguas  buenas  de  aquí,  y  desnu- 
darse porque  sus  calzas  y  jubón  me  trujeron,  y  se  conocie- 
ron por  criados  suyos  que  estaban  aquí  en  prisión ,  y  en- 
trar en  barquillo  pequeño  donde  á  vista  de  muchos  vieron 
cargar  en  él  tanta  gente  que  se  trastornó.  Dicen  algunos  ca- 


449 

pilanes  suyos,  que  también  habían  llegado  al  mesnio  barco, 
que  allí  se  había  ahogado :  hasta  agora  no  he  sabido  otra 
cosa  del.  Ostral  había  dos  dias  que  era  partido  del  campo, 
y  dicen  que  herido  en  el  pescuezo  del  día  de  Groninghen; 
aunque  aquí  se  ha  hallado  toda  su  ropa.  El  saco  ha  sido 
muy  rico,  los  soldados  han  ganado  mucho,  y  entre  otras 
cosas  creo  que  pasan  de  mil  y  quinientos  caballos.  Yo  me 
vine  á  alojar  á  su  propia  alojamiento ,  que  es  la  parte  mas 
enjuta  que  hay  en  toda  esta  campafia  para  recoger  la  gen- 
te, y  resolver  lo  que  he  de  hacer  della.  He  parado  hoy  aquí 
y  pienso  parar  mañana.  Gracias  á  Dios  que  él  ha  sido  servi- 
do de  desembarazar  á  V.  M.**  deslos  enemigos,  á  lo  cual  yo 
me  he  dado  toda  la  priesa  que  me  ha  sido  posible  para  po- 
der ,  si  esta  medecina  no  bastare  á  que  no  procedan  ade- 
lante los  que  dicen  que  se  levantan  en  Alemania ,  salir  á 
buscarlos  fuera  de  las  tierras  de  V.  M. ,  que  yo  confieso  que 
estado  fsic)  con  grandísima  vergüenza  esos  pocos  dias  que 
estotros  se  han  entretenidos  en  ellas.  Espero  en  Dios,  si 
vienen,  hará  dellos  lo  que  ha  hecho  destotros.  V.  M.  agra- 
dézcaselo muy  de  corazón ,  como  tengo  por  cierto  lo  hará, 
que  él  no  es  hombre  que  falta  á  sus  amigos. 

Muchos  son  los  que  han  servido  á  V.  M.**  en  esta  jor- 
nada y  han  puesto  sus  personas  donde  las  debían  poner 
gente  tan  honrada  como  ellos  son;  y  aunque  los  soldados 
han  hecho  milagros,  como  lo  harán  siempre  que  tengan 
buen  gobierno,  esta  victoria  han  dado  á  V.  M.*^  los  particu- 
lares hombres  que  en  ellos  se  hallaron.  Y  destos ,  todos  los 
que  mas  particularmente  se  han  señalado ,  han  sido  Sancho 
de  Avila,  Joan  de  Espuchc ,  Salazar,  los  maestros  de  campo 
Julián  y  D.  Sancho  de  Londoño;  los  otros  dos  no  hicieran 
menos  si  no  fueran  menester  donde  estaban ,  de  lo  cual  do 
quedan  poco  agraviados  de  mí;  y  tienen  razón  por  cierto  si 
Tomo  XXX.  29 


450 

yo  no  la  luviera  mayor  en  no  dejar  la  gente  sin  gobierno  y 
guardándolos  para  el  efeclo  dicho.  El  capilan  Gonzalo  Mon- 
tero ,  á  pié  y  á  caballo  ha  servido  esta  jornada  tan  bien  y 
t&nío  que  no  se  puede  aventajar.  Mis  sobrinos  D.  Hernando 
y  D.  Juan  Pacheco,  D.  Antonio  de  Toledo  y  D.  Rodrigo  de 
Toledo ,  que  cada  uno  dellos  llevaba  cargo  de  arcabuce- 
ría ,  han  servido  á  V.  M.  muy  bien ,  no  digo  del  combatir, 
que  esto  poco  hay  que  agradecelles ;  pero  de  gobernarse 
como  soldados  muy  viejos ,  y  V.  M.  crea  que  es  gran  bien 
haber  gente  noble  en  esta  infantería.  El  capitán  D.  Lope  de 
Figueroa  he  querido  dejar  de  dar  cuenta  á  V.  M.  á  la  postre 
del,  por  haber  sido  el  primero  que  dio  dentro  con  una  espa- 
da y  una  rodela ,  al  cual  no  hay  soldado  en  todo  el  campo 
que  el  dia  de  hoy  no  le  tenga  envidia ,  porque  á  una  voz  di- 
cen todos  que  fué  el  que  rompió  los  enemigos ,  llegando  de- 
lante solos  él  y  Sancho  de  Avila ,  que  estaban  en  la  van- 
guardia de  toda  la  gente. 

El  conde  de  Hembden  hasta  ahora  no  me  ha  enviado  á 
decir  palabra.  Un  castillo  suyo  que  está  de  la  otra  parte  de 
la  ribera,  cuando  Sancho  de  Avila  fué  á  reconocer  por  la 
mañana ,  les  tiró  algunos  golpes  de  artillería  y  mosquetes. 
No  veo  el  tiempo  aparejado  para  poderse  hacer  contra  él  lo 
que  V.  M.*^  me  envia  á  mandar,  como  mas  particularmente 
escrebiré  después  á  V.  M.**  Al  cual  ruego  á  Dios  dé  tan  larga 
vida  como  conviene  para  su  servicio ,  pues  la  emplea  en  lo 
que  ahora  vemos  que  se  ha  hecho ,  y  como  lodos  sus  vasa- 
llos y  criados  hemos  menester.  Del  campo  en  Yemecon  á  22 
de  julio  de  1568.  —  S.  C.  R.  M. — Las  manos  de  V.  M.  besa 
su  vasallo  y  criado.  —  El  duque  de  Alba. 

Sobre  de  la  carta. — A  la  S.  C.  R,  M.  el  Rey  nuestro 
señor,  en  manos  del  secretario  Gabriel  de  Zayas. — Cerra- 
da á21. 


451 


Capilulo  tic  cai'ta  del  duque  de  Alba  al  secretario  Gabriel 
de  Zayas,  ál  de  junio  de  1571. 


Siente  que  el  duque  de  Medinaceli  suplique  á  S.  M.  quite  á 
Sancho  Dávila  el  castillo  de  Amberes. 


(Estado,  legajo  núm.  546,  folio  118 J 

Aquí  (en  Bruselas)  hay  cartas  desa  corte  que  scriben 
que  el  señor  duque  de  Medinaceli  suplica  á  S.  M.  quite  á  San- 
cho de  Avila  el  castillo  de  Anvers  y  ponga  otro  caballero.  Y 
aunque  hay  cartas  de  hombres  que  dicen  se  lo  han  oido 
á  él ,  téngolo  por  tan  buen  caballero  que  no  puedo  creer  del 
una  monstruosidad  tan  grande  como  quitar  á  quien  ha  ser- 
vido como  Sancho  de  Avila ,  y  de  quien  él  aquí  puede  recibir 
tanto  servicio  y  buena  compañía.  El  descanso  de  sus  trabajos 
y  sudores  y  muy  mucha  sangre  derramada,  siendo  hombre 
que  si  estuviera  en  cabo  del  mundo,  habia  de  echar  el  duque 
el  bofe  y  pedir  con  las  rodillas  puestas  á  S.  M.  se  lo  hiciese 
venir  aquí ;  y  querer  comenzar  su  dictadura  deponiendo  los 
hombres  que  yo  he  puesto  para  servir  á  S.  M. ,  y  á  el  de 
quien  yo  tengo  tan  larga  experiencia  de  haberlo  visto  com- 
batir un  millón  de  veces  y  hecho  tan  buenas  facciones  cuanto 
ningún  soldadode  nuestra  nación  que  hoy  sea  vivo.  V.  m.  me 
la  hará  en  hablar  á  S.  M.  en  esta  materia  de  mi  parte,  di- 
ciéndole  que  si  es  verdad  que  el  duque  ha  tratado  desto  ó  si 
viniere  á  tratar ,  suplico  á  S.  M.  no  consienta  que  tal  ma- 
teria se  menee ,  siendo  Sancho  de  Avila  con  muy  muchas 
mas  cualidades  de  las  que  yo  podría  ^decir  á  S.  M.  y  muy 
muchos  servicios  muy  relevados  que  le  tiene  hechos ,  y  que 
bastara  cuando  no  hubiera  hecho  otro  que  la  rota  de  Dalem, 


452 

para  que  no  solamente  S.  M.**  no  consintiese  que  su  honra 
se  anduviese  poniendo  en  balanzas ,  pero  para  hacerle  mer- 
ced como  yo  se  lo  tengo  suplicado  y  se  lo  torno  a  suplicar; 
y  que  si  yo  soy  hombre  que  propongo  para  el  servicio  de 
S.  M/  y  pongo  en  él  chorrilleros ,  que  estará  muy  bien  que 
los  traten  como  ellos  son  ;  pero  tomándolos  siempre  los  me- 
jores que  hallo ,  como  Dios  sabe  bien  que  lo  hago ,  y  que  no 
los  conozco  por  información  sino  por  vista  de  ojos ,  grande 
agravio  se  me  baria  en  maltratar  y  deshonrar  los  que  yo 
meto  adelante  tan  justamente.  V.  m.  me  la  hará  en  decirlo 
á  S.  M/  muy  vivamente,  porque  cierto  solamente  dejar  pa- 
sar la  plática  adelante  ,  me  seria  de  tan  gran  afrenta  que  no 
sabría  donde  esconderme  que  la  gente  no  me  viese.  Nuestro 
Señor  la  muy  magnífica  persona  de  v.  m.  guarde  y  estado 
acreciente.  De  Bruselas  á  vn  de  junio  de  mdlxxi. — A  lo  que 
V.  M.  mandare.  —  El  duque  de  Alba. 


Párrafo  de  carta  del  secretario  Albornoz  á  Zayas ,  fecha 
en  Bruselas  á  20  de  diciembre  de  1571. 

Estado,  legajo  núm.  546, /oí.  175. 

Salinas,  Sancho  de  Avila,  Robles,  Mondragon  están 
desesperados  con  la  dilación.  Ayúdelos  v.  m.  por  amor  de 
Dios,  y  acuérdese  v.  m.  de  mí ,  pues  es  ya  negocio  de  honra 
y  como  tal  le  pongo  en  mano  del. 


úOú 


Copia  de  carta  original  de  Sancho  de  Avila  al  comenda- 
dor mai/or  de  Castilla,  fecha  en  Hcmes  á  14  c/e  abril 
de  1574. 

Rescebida  i  los  1S  del  á  la  tarde. 

Le  felicita  por  la  victoria  que  ha  conseguido. 
(Archivo  general  de  Simancas. ^Estado,  legajo  núm.  ool.J 

Ill."°  y  Ex."°  Señor  : 

Ha  parecido  á  Mos  de  Hierge  y  á  estos  caballeros  de  in- 
viar  á  Juan  Osorio  de  Huelva  á  dar  á  V.  E.  el  norabuena  de 
la  Vitoria  que  Nuestro  Señor  ha  dado  á  V.  E.,  de  la  cual  á 
él  se  le  den  las  gracias ,  porque  entendemos  ha  sido  de  mu- 
cha importancia ,  y  en  gran  coyuntura  y  de  gran  reputación 
para  todos. 

Querer  yo  decir  de  lo  bien  que  han  servido  los  soldados 
en  general  ni  en  particular,  seria  menester  hablar  de  cada 
uno  de  por  sí;  yo  lo  remito  todo  á  Juan  Osorio ,  no  obstanle 
que  Juan  Batista  de  Monte  lo  ha  hecho  tan  principalmente 
como  se  esperaba  del  y  del  barón  de  Xibrao;  digo  á  V.  E. 
que  es  uno  de  los  caballeros  y  soldados  mas  de  servicio  que 
yo  conozco ,  porque  en  este  dia  y  jornada  yo  lo  he  conocido 
muy  principalmente :  y  antes  el  capitán  Montesdoca  ha  pe- 
leado y  servido  tan  valientemente  cuanto  se  puede  decir; 
quedó  mal  herido.  Hablar  de  oficiales  mayores  de  lo  particu- 
lar y  valientemente  que  asi  han  servido  y  la  parte  que  son 
para  que  los  soldados  sirvan  con  voluntad ,  podria  decir, 
que  harán  mas  con  D.  Hernando  de  Toledo  cien  soldados 
que  con  otros  docientos,  y  ansina  vi  para  ganar  las  trin- 


454 

cheas  del  casar  de  Moguen  se  halló  con  los  que  acometie- 
ron primero,  y  habiendo  llegado  una  vez  los  nuestros,  les 
tornaban  á  recobrar  los  herejes ,  á  lo  que  he  entendido,  si  él 
no  se  hallara  allí. 

Sé  decir  á  V.  E.  que  ha  sido  servido  de  todos  con  mu- 
cha voluntad  y  consideración,  y  se  puede  creer  que  don- 
de está  el  coronel  iMondragon,  D.  Bernardino  de  Mendoza,  y 
D.  Gonzalo  de  Bracamonte,  y  el  coronel  Alonso  López  Gallo 
y  los  demás  soldados  que  V.  E.  ha  inviado  aquí. 

De  los  muertos  y  presos  de  los  enemigos  son  muchos  y 
no  se  sabe  mas  de  que  entrellos  hay  mucha  gente  principal; 
y  para  tan  gran  vitoria  y  peleado  tanto  rato,  habemos  recibi- 
do poco  daño  de  muertos  y  heridos ,  aunque  es  mucha  por 
ser  tan  buenos  soldados,  y  el  mayor  y  que  mas  he  sentido 
fué  la  pérdida  de  D.  Hernando  Ponce  que  se  perdió  por  ser 
el  mas  osado  y  valiente  caballero  que  yo  he ,  y  cierto  creo 
que  me  perdiera  yo  si  no  me  hicieran  creer  que  no  era  per- 
dido, sino  que  se  habia  retirado;  mas  él  quiso  contra  mi 
voluntad  ir  donde  fué  yendo  mal  á  caballo  como  iba.  El  es 
vivo  á  lo  que  se  entiende  y  tiene  tres  heridas,  aunque  no 
mortales,  y  que  el  conde  Ludovico  le  invió  á  curar.  De  los 
particulares  que  se  entendieren,  se  dará  aviso  á  V.  E. 

V.  E.  provea  de  dineros  para  estos  soldados  que  tan  bien 
los  merecen  y  se  les  deben,  y  si  no  se  proveen,  entiendo  que 
ellos  los  pidirán  y  que  no  ternán  consideración  al  tiempo 
que  es  y  á  que  no  los  hay. 

También  se  puede  perdonar  á  las  compañías  del  tercio 
de  Lombardía,  pues  ellos  han  servido  y  peleado  tan  princi- 
palmente y  valientemente  que  no  lo  sabría  decir.  Aquí  han 
traído  una  banda  y  unas  joyas  que  dicen  todos  que  son  del 
hijo  del  conde  Palatino. 

Mañana  si  Dios  quisiere  tornaré  á  pasar  la  Mosa  con  toda 


455 

la  gente  que  truje  por  algunos  respetos  que  dirá  Juan  Oso- 
rio  (1).  Nuestro  Señor  la  11!.'°'  y  Ex."'  persona  de  V.  E. 
guarde ,  y  en  estados  y  vida  acreciente  como  sus  servido- 
res y  criados  deseamos.  De  Hemes  y  abril  14  á  las  siete  de 
la  tarde  de  1574.-111.°"°  y  Ex.'"''  Señor.— De  V.  E.—  Ser- 
vidor y  criado  de  V.  E. — Sancho  Dávila. — Por  otras  he  su- 
plicado á  V.  E.  me  dé  licencia,  y  ahora  se  lo  lomo  á  suplicar. 
Sobre:  AI  111.™'*  y  Ex.""  Señor  el  comendador  mayor  de 
Castilla,  mi  señor,  del  Consejo  Destado  de  S.  M.,  su  gober- 
nador ca       (2)      al  destos  Estados  de  Flandes. 


Copia  de  caria  original  del  comendador  mayor  de  Castilla 
á  S.  M.y  fecha  en  Bruselas  á  17  de  abril  de  1574. 

Recibida  en  3  de  mayo  con  Juan  Osorio  de  Ulloa. 

Le  envía  la  carta  de  Sancho  Dávila ,  y  le  recomienda  los  que  se 
distinguieron  en  la  batalla  de  Hemes. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Negociado  de  Estado,  legajo 
núm.  ^l.J 

S.  C.  R.  M. 

Nuestro  Señor  ha  sido  servido  de  dar  á  V.  M.  una  vic- 
toria, que  por  ser  en  tal  coyuntura  se  debe  de  estimar  en 
mas  que  otras  que  al  mundo  habrán  parecido  mayores :  ben- 
dito sea  él  por  ello,  en  quien  espero  que  ha  de  ser  ocasión 
y  principio  para  tomar  las  cosas  destos  Estados  muy  diferen- 

(1)  .4/  margen  dice  de  letra  del  Rey:  ""No  me  los  dijo,  será  bue- 
no preguntárselos." 

(2)  Asi. 


456 

te  término  del  que  agora  tenían.  Y  aunque  ayer  de  mañana 
llegó  aquí  el  correo  que  V.  M.  mandó  despachar  á  los  tres 
deste,  y  quería  comenzar  á  respondeí  á  las  sartas  que  trujo, 
me  ha  parecido  no  dífirír  de  dar  á  V.  M.  esta  buena  nueva, 
y  enviar  con  ella  á  Juan  Osorío  de  ülloa ,  que  como  quien 
se  halló  en  la  batalla,  y  cumplió  en  esta  ocasión,  como  lo  ha 
hecho  en  otras  muchas,  con  su  deber ,  sabrá  dar  cuenta  de 
todas  las  particularidades ;  y  también  envío  la  carta  que  San- 
cho de  Avila  me  escribió,  al  cual  suplico  á  V.  M.  haga  mu- 
cha merced,  que  como  en  otras  he  escrito  es  soldado  de  mu- 
cho servicio,  y  le  ha  hecho  muy  grande  en  esta  facción,  y  en 
lodo  el  tiempo  que  ha  estado  impidiendo  á  los  enemigos  el 
paso  de  la  Mosa ,  y  también  la  merecen  el  dicho  Juan  Oso- 
río  y  Juan  Bautista  del  Monte,  y  el  varón  de  Xebrao  y  los 
demás  que  Sancho  de  Avilla  nombra  en  su  carta.  Suplico  á 
V.  M.  se  la  haga  en  las  ocasiones  que  se  ofrescieren ,  y  en 
tanto  les  mande  escribir  á  todos  agradeciéndoles  lo  bien  que 
lo  han  hecho. 

Agora  mas  que  nunca  es  necesario  hacer  en  las  provi- 
siones de  lo  de  aquí,  así  de  mar  como  de  tierra ,  lo  que  he 
suplicado,  y  V.  M.  con  tanto  cuidado  manda  proveer,  y  asi- 
mismo es  buena  ocasión  para  que  los  subditos  (1)  estimen 
en  mas  las  gracias  que  V.  M.  les  manda  hacer;  y  en  la  del 
perdón  general  quisiera  que  se  hubieran  dado  estos  minis- 
tros mas  prisa  en  aparejar  lo  necesario  para  la  publicación, 
y  yo  les  doy  la  que  puedo.  Querría  inrmilo  poder  seguir  con 
prisa  esta  victoria  y  apretar  á  los  enemigos  por  diversas  par- 
les, y  volver  á  ocupar  lo  que  habíamos  dejado  en  Holanda, 
y  temo  que  lo  ha  de  estorbar  la  falta  del  dinero,  porque  los 

(1)  Esü  subrayado  en  el  original  lo  que  en   esta  caria  va  de 
cursiva. 


467 

españoles  que  se  hallaron  en  esta  batalla  han  cumplido  lo  que 
antes  dijeron ,  que  fué  amotinarse  pocas  horas  después  de  la 
victoria,  que  como  Juan  Osorio  referirá  los  dejó  ya  con  su 
electo,  y  sin  haber  aprovechado  lo  que  les  habló;  y  el  con- 
de de  la  Rocha  y  el  maestro  de  campo  Valdés  me  enviaron 
dos  dias  ha  un  capitán  avisándome  que  estaban  amotinados 
los  alemanes  altos  y  bajos  de  Holanda ,  y  que  los  que  destos 
estaban  en  los  diques  y  fuertes  que  se  conservan  los  querían 
desamparar,  y  los  que  hablan  venido  á  la  banda  de  Utrecht, 
y  asimismo  los  españoles  no  querían  volver  en  ninguna  ma- 
nera á  Holanda ,  y  si  pasan  adelante  con  su  obstinación  pasa 
gran  peligro  Amsterdam  y  Harlem ,  si  ya  la  reputación  desta 
victoria  no  hace  desmayar  á  los  ingleses ,  escoceses  y  fran- 
ceses ,  de  que  tiene  mucho  número  el  príncipe  de  Orangc 
en  Holanda  y  Celanda,  y  cada  dia  le  viene  mas.  Yo  me  hallo 
sin  un  real  para  desamotinar  esta  gente ,  ni  para  pagar  la 
que  de  nuevo  viene ,  asi  de  infantería  como  caballería ,  y 
aquí  he  enviado  á  llamar  cinco  ó  seis  mercaderes  de  Anvers 
para  rogarles  que  me  socorran,  y  no  puedo  acabar  con  ellos 
cosa  de  importancia.  Excúsanse  con  la  estrecheza  de  la  plaza 
y  no  hallarse  contado,  y  de  todo  hay  muy  gran  falta;  pero 
bien  creo  que  podrían  hacer  ellos  algo  mas ,  si  no  se  quisie- 
sen aprovechar  de  las  ocasiones  para  sus  mayores  intereses. 
De  los  prestidos  que  habia  hecho  pedir  en  el  pais,  no  he  po- 
dido sacar  nada ,  y  aunque  los  Estados  después  de  juntos 
acuerden  las  ayudas,  será  á  plazos  tan  largos  que  aunque 
no  hubiese  ninguna  consignación  sobre  ellas,  no  pueden  re- 
mediar la  necesidad  presente ;  y  aunque  yo  venderé  mi  plata 
y  lo  demás  que  tuviere  en  mi  casa,  y  aceptaré  si  algunos 
otros  quisieren  hacer  lo  mismo ,  es  poco  lo  que  con  esto  se 
puede  suplir.  Dios  lo  remedie,  que  bien  sé  que  V.  M.  hace 
todo  lo  que  puede,  y  yo  tendria  á  muy  buena  dicha  mia  de 
poder  excusar  de  representallo  tantas  veces  á  V.  M. 


458 

Aquel  francés  Mos  de  Tixe  que  ha  mas  de  tres  meses 
escribí  á  V.  M.  que  levantaba  gente  por  estos  rebeldes,  se 
venia  ya  llegando  á  la  'parle  de  Luxemburg  con  15  bande- 
ras de  infantería  y  golpe  de  caballería ,  y  ayer  tuve  aviso  co- 
mo el  príncipe  de  Conde,  que,  como  á  V.  M.  habrá  avisado 
D.  Diego  de  Zúñiga,  fué  partícipe  en  el  trato  que  se  descu- 
brió contra  el  rey  de  Francia,  se  habia  venido  á  valer  á  casa 
de  aquel  Mos  de  Esdam,  que  se  hace  llamar  duque  de  Bul- 
lón ,  y  que  no  le  habia  querido  acoger,  y  que  él  se  habia  ido 
á  ciertas  tierras  cerca  de  Ibois  y  Monmedin,  y  que  allí  se  le 
juntaba  golpe  de  gente  de  los  hugonotes,  y  temían  que  se 
juntasen  con  el  dicho  Tixe  en  daño  destos  Estados.  Podrá 
ser  que  cuando  sepan  que  el  conde  Ludovico  es  roto ,  miren 
mejor  lo  que  hacen ,  y  también  me  parece  que  ha  traído  Dios 
á  buen  tiempo  este  nuevo  trato  del  de  Alenzon,  según  esta- 
ban su  hermano  y  madre  resueltos  de  hacer  la  paz  con  los 
hugonotes  con  condiciones  tan  en  deservicio  de  Dios  y  de 
V.  M.  como  se  habrá  entendido. 

Por  la  carta  de  Sancho  de  Avila  verá  V.  M.  como  se 
perdió  D.  Fernando  Ponce.  Si  fuere  vivo  y  le  quisieren  dar 
por  cualquier  prisionero  de  los  que  acá  hubiere,  me  atreve- 
ré á  trocalle  por  él  sin  esperar  otra  licencia  de  V.  M.,  por- 
que demás  de  lo  que  se  debe  por  ser  hijo  de  su  padre ,  cer- 
tifico á  V.  M.  que  es  uno  de  los  virtuosos  y  valientes  caba- 
lleros que  yo  conozco  y  de  mucha  expectación. 

Aunque  de  los  pocos  dias  que  aquí  traté  á  Juan  Baup- 
tisla  de  Tasis  me  pareció  hombre  de  mucho  servicio ,  hán- 
melo  encarecido  tanto  después  lodos  los  ministros  que  aquí 
tiene  V.  M.,  y  otras  personas  que  le  conocen,  que  para 
cuantas  cosas  me  han  faltado  hombres ,  me  decían  que  ú 
Juan  Bauptisla  estuviera  aquí  fuera  bueno  para  ellas,  y  par- 
ticularmente para  encargarse  de  la  armada  de  Amsterdam 
mientras  el  conde  de  Dossu  sale,  porque  se  junta  en  él  ser 


459 

soldado  y  hombre  de  negocios  y  de  mucha  diligencia  y  sa- 
ber perfectamente  la  lengua  flamenca  y  el  alemán ,  demás 
de  la  española ,  francesa  y  italiana ,  y  ser  muy  bien  quisto 
de  la  gente  del  pais  y  de  nuestra  nación  y  de  las  otras;  por 
todo  lo  cual  suplico  á  V.  M.  le  mande  volver  luego  acá  por 
la  posta,  y  con  toda  diligencia,  y  que  traiga  entendido  que 
ha  de  servir  en  todo  lo  que  se  le  ordenare ,  aimquc  sea  en- 
cargarse de  aquella  armada,  puesto  caso  que  si  antes  le 
hallase  dueño ,  no  dejarla  de  dársele  por  la  necesidad  que 
dello  hay. 

También  rescibiré  muy  gran  merced  que  mandase  V.  M. 
volver  acá  á  D.  Rodrigo  Zapata,  y  al  capitán  D.  Pedro  de  Ve- 
lasco  y  á  Juan  Osorio  de  Ulloa  (aunque  él  me  ha  prometido 
de  volver) ,  y  lodos  tres  son  hombres  de  mucho  servicio  y 
tienen  harta  noticia  de  lo  de  acá,  y  presupongo  que  ya  será 
partid©  D.  Alonso  de  Vargas,  y  que  V.  M.  se  habrá  resuelto 
en  el  que  ha  de  tener  cargo  de  la  caballería,  de  que  hay 
mucha  necesidad,  y  si  no  suplico  á  V.  M.  lo  resuelva  luego. 
Cuya  muy  real  persona  Nuestro  Señor  guarde  por  muy  lar- 
gos años  y  sus  reinos  prospere  como  la  cristiandad  lo  ha 
menester  y  los  vasallos  y  criados  de  V.  M.  deseamos.  En 
Bruselas  á  17  de  abril  1574.  De  V.  M.  hechura,  vasallo  y 
criado  que  sus  reales  pies  y  manos  besa. — Don  Luis  de  Re- 
quesens. 

De  su  mano. 

Suplico  á  V.  M.  mande  escribir  á  Mr.  de  Hierge  agrade- 
ciéndole lo  bien  que  lo  ha  hecho  en  esta  facción ,  que  por 
haberse  hecho  en  el  distrito  donde  él  es  gobernador,  se  le 
deben  todas  gracias,  demás  de  haberse  hallado  en  la  jorna- 
da y  iraido  á  iclla  ilas  cuatro  compañías  de  españoles  jviejos 
que  primero  se  hablan  amotinado ,  demás  de  otros  trcscien- 


460 

los  españoles  que  Sancho  de  Avila  le  habia  primero  inviado 
para  la  guarda  de  Niriicga  que  los  trujo  asimismo,  y  se  con- 
formó muy  bien  con  Sancho  de  Avila ,  y  su  conformidad  y 
buena  orden  fué  muy  gran  parle  para  el  buen  suceso.  — 
Tiene  su  rúbrica. 


Copia  de  caria  del  comendador  mayor  de  Caslilla  á  San- 
cho de  Avila.  De  Bruselas  á  20  de  abril  de  1574. 

Le  nianiíiesla  el  senliniiento  que  tiene  por  el  motín  de  los  sol- 
dados espaííoles,  y  le  indica  los  medios  de  que  debe  valerse  para 
aquietarlos. 

(Archivo  general  de  Simancas. — Estado,  legajo  núm.  bol.) 

Muy  magnífico  Señor :  Hasta  ayer  tarde  no  recibí  las 
cartas  dev.  m.  del5yl6  deste,  que  me  las  dio  el  capi- 
tán Granate,  y  sentí  mucho  entender  que  pasaba  tan  ade- 
lante la  alteración  de  nuestros  españoles,  espantándome  que 
quieran  tan  voluntariamente  perder  el  fruto  y  el  hon^  de  la 
Vitoria,  que  Dios  nos  ha  dado  por  sus  manos,  pues  no  cum- 
plen con  decir  que  ellos  vendrán  á  ponellas  en  los  enemigos 
siempre  que  fuere  menester,  pues  ya  lo  pudieran  haber  he- 
cho en  mas  de  una  parte  después  desla  vitoria,  si  no  se  hu- 
biesen alterado,  y  el  saber  que  lo  están,  no  solo  es  causa  que 
los  dichos  enemigos  se  rehagan ,  pero  que  se  nos  descubran 
otros  muchos  nuevos,  y  que  los  encubiertos  que  son  muchos 
mas,  cobren  el  ánimo  que  este  subceso  les  habia  hecho 
perder. 

Yo  veo  bien  que  por  una  parte  tiene  esa  gente  mucha 
razón  de  desear  que  se  fenezca  su  cuenta,  y  ser  entera- 
mente pagados,  y  Dios  es  Icstigo  que  ninguno  dellos  ni  aun 


461 

todos  junios  lo  desean  ni  procuran  lanío  como  yo;  pero  por 
olra  habían  de  considerar  de  la  manera  que  yo  si  halle  es- 
tos Estados  y  la  intolerable  costa  que  S.  M.  tiene  en  la  subs- 
tenlaeion  de  la  gente  de  guerra  que  en  ellos  hay ,  sin  tener 
ninguna  ayuda  de  los  mismos  Estados,  y  que  ningún  cami- 
no peor  pueden  tomar  para  que  se  les  den  sus  pagas  que  al- 
terarse ,  porque  cierran  la  puerta  á  todos  los  que  puede  ha- 
ber para  hallarse  dineros;  y  si  yo  tuviera  forma  de  habellos 
como  lo  he  procurado  y  procuro ,  no  era  menester  alterarse 
para  que  les  inviara  sus  pagas,  ni  bastara  habello  hecho  no 
teniendo  con  que  dárselas ,  y  el  verdadero  camino  para  ha- 
bellas  era  continuar  con  orden  y  obidienciá  el  servicio  y  eje- 
cutar la  Vitoria ,  porque  desla  manera ,  como  lo  espero  en 
Dios,  se  redujesen  los  rebeldes  á  su  obediencia  y  á  la  del 
Rey,  tendremos  ayuda  en  los  Estados  para  pagar  la  gente  de 
guerra ,  y  está  claro  que  ha  de  comenzar  esto  por  la  espa- 
ñola ,  y  de  otra  manera  ni  habrá  con  que  pagar  la  una  ni  la 
otra ,  demás  de  que  serán  causa  de  hacer  tanto  daño  al  ser- 
vicio de  Dios  y  del  Rey,  y  perder  tanto  honor  dellos  mismos, 
y  de  toda  nuestra  nación ,  que  cierto  yo  tengo  grandísima 
lástima  de  la  reputación  que  se  va  perdiendo,  y  del  conten- 
tamiento que  se  da  á  los  herejes  y  rebeldes ,  y  á  los  demás 
que  nos  aborrecen ,  viendo  que  los  españoles  que  solian  ser 
su  castigo,  nos  hacen  mas  daño  y  vergüenza  que  ellos  mis- 
mos, y  para  aquí  y  para  adelante  di     (1)     que  entiendo  que 
será  así,  si  perseveran  en  esta  alteración. 

Podríase  acordar  esta  genle,  pues  no  puede  dejar  de  te- 
ner noticia  dello,  que  en  las  parles  donde  yo  he  tenido  á  mi 
cargo  gente  de  guerra,  que  son  en  la  mar,  reino  de  Grana- 
da y  estado  de  Milán,  los  he  pagado  mas  puntualmente  que 

(I)  Asi. 


4(>2 

ningún  otro  ministro,  y  de  muy  mejor  gana  lo  baria  en  Flán- 
des  si  pudiese,  y  no  pudiendo  aproveclia  poco  en  alterarse, 
y  soy  español ,  y  amo  y  estimo  tanto  mi  nación  como  todos 
los  que  en  España  nacieron,  y  tanto  mas  siento  que  den  cau- 
sa que  nos  estimen  y  tengan  en  poco  las  otras ,  y  si  no  bas- 
tare la  vergüenza  que  desto  seria  justo  tuviesen,  se  debrian 
de  acordar  que  tractan  la  causa  de  Dios  y  de  su  religión  ca- 
tólica, y  que  han  de  temer  su  castigo  si  ellos  lo  fueren,  de 
que  esta  se  pierda. 

Si  considerado  esto  quisieren  aquietarse  luego,  v.  m.  les 
puede  asegurar  en  mi  nombre  que  se  les  perdonará  su  error, 
sin  hacer  ninguna  forma  de  castigo,  que  tan  justamente  le 
raerecian  muy  grande,  y  que  dando  muestra  se  fenecerá  ente- 
ramente cuenta  con  ellos ,  y  que  procuraré  todo  cuanto  en  mí 
fuere  de  didles  sus  pagas  lo  mas  presto  que  yo  pueda ,  que 
espero  en  Dios  será  mucho  antes  que  llegue  el  plazo  de  la 
consignación  que  el  señor  duque  Dalba  hizo,  porque  este  es 
muy  largo ;  y  que  para  no  cargar  la  deuda  se  les  irá  dando 
cada  mes  sus  pagas  enteras  á  los  tiempos  que  agora  se  les 
daban  los  socorros ,  comenzando  del  dia  que  dieren  la  mues- 
tra, y  en  tanto  se  les  enviará  su  socorro,  y  algún  paño  y 
seda  que  queda  en  Anveres  de  los  asientos  pasados ,  con  que 
puedan  vestirse ;  y  si  pensara  no  cumplilles  mi  palabra ,  pu- 
siérales  plazo  cierto ;  pero  soy  tan  puntual  que  jamás  quise 
prometer  lo  que  no  sé  cierto  que  puedo  cumplir ,  y  lo  que 
agora  prometo  es  que  haré  en  esto  todo  lo  que  humanamente 
pudiere ,  y  que  espero  en  Dios  que  será  mas  corlo  plazo  del 
con  que  quizá  ellos  se  contentarían. 

No  he  querido  dejar  de  decir  en  esta  que  me  han  avisa- 
do que  mucha  gente  del  pais  tomaba  las  armas  contra  estos 
españoles,  y  en  tanto  número  que  la  podrían  mal  resistir, 
y  aunque  seria  lástima  ,  que  nunca  acabarla  yo  de  perder 


463 

el  velles  hacer  lan  ruin  fin ,  y  procuraré  todo  lo  que  eu  mi 
fuere  de  cslorballo.  Por  otra  parte  cuando  esto  subccdiese, 
pensaría  que  era  juicio  de  Dios  para  castigarnos  por  nuestros 
pecados ,  y  que  queria  tomar  otro  instrumento  que  el  de 
nuestra  nación  para  el  castigo  de  sus  enemigos ,  pues  está 
claro  que  no  ha  de  desamparar  su  iglesia,  y  sí  atravesarse 
en  esto  el  servicio  de  Dios  y  del  rey ,  y  su  honra  y  de  toda 
la  nación,  y  sus  propias  vidas,  y  la  imposibilidad  que  hay 
de  conseguir  por  este  camino  el  fin  que  pretenden  y  cuan 
fácil  será  por  el  que  he  dicho :  y  si  no  bastare  á  persuadillos, 
no  sé  que  hacer  mas  sino  encomendallo  á  Dios  y  quedar  con 
menos  lástima  de  cualquier  ruin  suceso  que  tengan,  habiendo 
hecho  de  mi  parte  cuanto  puedo  para  eslorballo.  Y  si  qui- 
sieren otra  prenda ,  lo  que  les  puedo  enviar  es  mi  plata  y 
alhajas  de  mi  casa ,  sin  que  me  quede  ninguna ,  y  también 
les  diera  mi  propia  persona ,  si  no  fuera  el  acudir  á  otras  par- 
tes tan  necesario  al  servicio  de  Dios  y  del  rey. 

No  he  querido  enviar  desde  acá  persona  propia  á  habla- 
lies,  pareciéndome  que  no  es  menester,  estando  ahí  la  de 
V.  m.  y  las  de  los  maeses  de  campo  D.  Hernando  de  Toledo 
y  D.  Gonzalo  de  Bracamente,  capitanes  y  oficiales  que  sa- 
brán ponelles  delante  lo  que  les  conviene ,  con  que  quedo 
muy  confiado  que  se  aquietarán ,  si  ya  no  lo  hubieren  hecho 
antes.  De  lo  cual  me  avise  v.  m.  luego  |para  que  dé  orden 
que  se  alojen  eu  Brabante  hasta  que  se  hayan  de  emprender 
los  Estados  que  por  otras  he  escrito  á  v.  m.  Cuya  etc. 


Otra. 


Muy  Mag.*^**  Señor 

i 


A  V.  m.  le  habrá  parecido  que  he  tardado  mucho  en 
responder  á  las  cartas  que  me  escribió  sobre  el  molin  de  los 


46i 

españoles ,  y  asimismo  en  proveer  de  dinero  para  el  remedio 
desto  y  de  otras  eosas  necesarias;  y  si  viese  lo  que  acá  pasa 
se  desengañaria  dello,  porque  sin  las  otras  muchas  ocupa- 
ciones, es  menester  todo  el  tiempo  para  persuadir  á  los 
mercaderes  de  Anveres  que  aquí  he  enviado  á  llamar  que 
me  socorran  en  esta  necesidad ,  y  hasta  agora  ha  sido  con 
poco  fruto.  Y  v.  m.  se  asegure  que  no  el  enviar  mucho  di- 
nero, no  es  por  no  querer  ni  dejar  de  entender  lo  que  con- 
viene, sino  porque  no  se  puede  hacer  humanamente  mas, 
y  Dios  sabe  lo  que  yo  lo  siento. 

Escribo  la  otra  carta  que  con  esta  será,  para  que  v.  m. 
si  le  pareciere  la  pueda  mostrar  á  los  españoles  amotinados, 
y  en  verdad  que  no  les  encarezco  en  ella  nada ,  y  yo  les 
cumpliré  lo  que  allí  digo.  Y  en  lo  que  toca  al  paño  y  seda 
se  puede  v.  m.  alargar  que  será  hasta  diez  ó  doce  escudos 
por  soldados ,  y  dándoles  de  aquí  adelante  pagas  enteras, 
gozarán  dcslo  los  capitanes  y  oficiales  y  los  que  tienen  ven- 
tajas, que  hasta  aquí  eran  todos  iguales  en  los  socorros,  y 
lo  mismo  que  se  hiciere  con  los  amotinados  haré  luego  con 
todos  los  otros  españoles  que  no  lo  están ,  porque  no  les 
acaezca  lo  que  en  Harlem ,  que  me  dicen  que  se  pagaron  los 
amotinados  y  que  á  los  otros  no  se  dio  un  real. 

Tengo  entendido  por  muchos  indicios,  que  son  casi  cier- 
tos ,  que  la  mayor  cul[)a  dcste  motin  es  de  algunos  de  los 
capitanes  y  oficiales,  de  que  yo  me  acordaré  bien  á  su  tiempo 
si  luego  no  lo  remedian,  y  á  los  soldados  se  les  guardará 
la  palabra  que  se  les  da  en  lo  del  castigo ;  pero  si  no  se  fia- 
re:i  desto  y  tardan  en  reducirse,  procuraré  que  hallen  el 
que  merecen,  aconhorlándome  de  cualquier  subceso  que  tu- 
vieren ;  pero  muy  confiado  estoy  qie  no  le  puede  haber  malo 
con  la  buena  diligencia  y  maña  de  v.  m. ,  á  quien  certifico 
de  nuevo  que  no  puedo  hacer  mas.  Guarde  etc. 


465 


Copia  de  carta  de  Mos  de  Champdñi,  gobernador  de  Ambt' 
res,  á  S.  M.,  de  28  de  abril  1574. 


be  leirade  \      "  Con  relación  del  motin  y  su  descargo,  y  pide 
¿ayas  dice :    \  licencia  para  se  ir  á  su  casa. 


''Relación  de  lo  que  pasó  Mos  de  Champañi,  gobernador 
de  Anvers  j  acerca  de  la  entrada  de  los  españoles  que 
tinieron  amotinados  de  la  rota  de  Moquen  en  aquella  vi' 
lia,  traducida  de  francés. 

(Archivo  general  de  Simancas, — Estado,  legajo  núm.  5o7.) 

A  los  49  de  abril  1574  vino  á  Mos  de  Champañi,  gober- 
nador de  la  villa  de  Anvers,  un  sargento  del  castillo  (cuyo 
nombre  no  sabe),  hombre  de  mediana  estatura,  la  barba  ber- 
meja sembrada  de  canas ,  que  de  parte  del  teniente  del  di- 
cho castillo  le  advirtió  que  los  españoles  amotinados  mar- 
chaban derechos  á  aquella  villa  para  apoderarse  della ,  ó  de 
la  de  Gante,  y  que  ya  estaban  cerca  de  Bolduque,  y  aun  á 
lo  que  algunos  decian  mas  acá ,  caminando  á  grandes  jor- 
nadas. A  lo  cual  respondió  Mos  de  Champañi  que  tenia  por 
sin  dubda  que  no  podrian  entrar  sino  por  la  rotura  de  la 
muralla ,  que  estaba  cerrada  con  una  muy  ruin  tapia ,  y  te- 
nia poco  foso ;  pero  que  con  asistencia  del  castillo  esperaba 
defenderles  la  entrada ,  y  que  desta  asistencia  estaba  muy 
seguro.  Dijo  el  sargento  que  creia  que  los  españoles  que  allí 
había  de  presidio  no  se  meterían  en  esto,  y  que  jamás  se 
vio  que  soldados  se  empleasen  unos  contra  otros  de  cual- 
quier nación  que  fuesen ,  y  menos  en  tal  ocasión ,  por  ser  la 
causa  común ;  y  que  no  creia  que  los  valones  y  tudescos  que 
Tomo  XXX.  50 


466 

el  dicho  Ghampañi  allí  tenia  harian  otra  cosa.  El  cual  le  re- 
plicó que  todo  este  hecho  dependia  de  los  oficiales ,  y  que  te- 
nia á  los  del  castillo  por  tan  honrados ,  que  harian  hacer  á 
su  gente  todo  lo  que  conviniese  al  servicio  de  S.  M.:  que  los 
valones  no  tenian  ninguna  cosa  común  en  la  causa  de  los 
amotinados ,  porque  estaban  en  su  primera  paga  y  que  los 
ayudarla  con  todo  su  poder ,  de  manera  que  no  tuviesen  oca- 
sión de  rehusar  lo  que  les  mandase  por  servicio  de  S.  M.,  y 
que  con  los  alemanes  se  acomodaria  tan  bien  que  no  dubdaba 
de  nada,  haciendo  el  castillo  su  deber,  pues  estaba  fundado 
para  defensa  de  la  villa.  Respondió  el  sargento  que  los  oficia- 
les del  castillo  eran  pocos ,  y  que  la  multitud  lo  ganarla, 
dando  á  entender  que  quizá  no  solamente  no  se  contenta- 
rian  los  soldados  con  no  estorbar  la  entrada  á  los  amotina- 
dos ,  pero  que  como  de  gente  que  de  muy  atrás  estaba  des- 
contenta, habia  mas  que  temer. 

De  todo  esto  advirtió  luego  al  comendador  mayor  el  di- 
cho Ghampañi  con  persona  propia,  y  que  los  alemanes  que 
allí  estaban  en  guarnición  no  quedaban  mas  satisfechos  que 
los  otros,  ni  la  armada  que  habia  en  el  puerto.  Que  la  villa 
era  muy  grande  y  habia  poca  gente  de  respeto  de  la  que  era 
menester  para  defenderla ,  mayormente  que  no  habia  en  toda 
ella  masde  media  colubrina  fsicj  y  dos  pecezuelas  de  hierro 
colado ,  que  estaban  puestas  en  la  ribera  de  la  parle  de  los 
Oosterlines  para  favorescer  á  nuestra  armada. 

Luego  el  mismo  dia  puso  á  lodos  los  valones  de  guardia 
á  la  rotura  de  la  muralla ,  y  á  los  alemanes  en  el  cuartel 
mas  cercado  (1),  así  por  la  ruin  guardia  que  hacen,  como 
porque  de  las  cuatro  compañías  que  habia  se  temia  de  las 
dos  de  Frainsper,  cuyas  siete  otras  del  regimiento  que  es- 

(1)  Asi. 

.XZX  OHoT 


407 

laban  en  Holanda  se  habían  amotinado,  tomando  por  oca- 
sión con  los  dichos  alemanes  ^  que  hasta  entonces  habian  he- 
dió guardia  comunmente  con  los  valones  >  que  por  la  como- 
didad de  sus  cuerpos  de  guardia  que  estaban  en  la  plaza  y 
hacia  los  Ooslerünes ,  daba  ú  los  valones  la  de  la  rotura  como 
mas  cerca  de  sus  posadas ,  y  de  la  del  dicho  Ghampañi  y  de 
su  cuerpo  de  guardia  que  estaba  en  la  Mera,  concurriendo 
con  esto  que  habiendo  enviado  el  comendador  mayor  una  de 
sus  compañías  á  Holanda  por  escolta,  deseaba  tener  las  otras 
cuatro  juntas,  para  poder  mejor  servir  y  ser  mas  obedescido. 
El  dia  siguiente  hizo  abrir  solamente  por  la  parte  de  la 
tierra  la  puerta  Imperial ,  por  ser  la  mas  cercana  de  su  casa 
y  la  mas  acomodada  para  las  cosas  necesarias  al  servicio  de 
la  villa,  y  solas  tres  por  la  parte  de  la  mar,  y  luego  hizo 
pregonar  un  edicto  muy  severo,  que  ningún  vecino  diese 
posada  á  soldado  alguno  español  que  no  estuviese  enfermo, 
por  satisfacer  á  otro  que  pocos  dias  antes  había  hecho  pu- 
blicar el  comendador  mayor ,  con  fin  que  todos  los  que  eran 
de  servicio  se  fuesen  á  sus  banderas,  y  juntamente  ordenó 
muy  expresamente  á  los  de  las  puertas  que  sin  su  sabiduría 
no  dejasen  entrar  á  ningún  soldado  de  cualquier  nación  que 
fuese  que  viniese  del  campo ,  porque  tenia  aviso  que  la  gen- 
te de  Mondragon  se  habia  amotinado,  y  que  de  las  compa- 
ñías españolas  que  asimismo  lo  estaban ,  algunos  se  habian 
adelantado  y  entrado  ya  á  la  deshilada  en  la  villa. 

Y  por  hallarse  con  poco  presidio  para  una  villa  tan  gran- 
de, y  porque  no  le  anticipasen  antes  que  el  comendador  ma- 
yor le  reforzaba,  advirtió  á  los  dos  burgomaestres  y  á  Mos«áe 
Berghen,  superintendente  de  la  Cámara  de  Cuentas  (que  lo- 
dos tres  son  cabezas  de  las  cofradías),  que  tuviesen  su  gente 
en  orden  para  cuando  fuese  menester,  encargándoles  mucho 
el  secreto  por  no  alterar  la  villa,  sin  querer  decir  nada  á  las 


468 

naciones  hasta  entender  de  cierto  el  designo  de  los  amoti- 
nados, á  los  cuales  habia  enviado  á  reconoscer,  temiendo 
que  el  miedo  no  hiciese  salir  los  mercaderes ,  y  se  divirtiese 
el  trato,  dando  cuenta  de  todo  al  comendador  mayor,  y  que 
tenia  prestos  quince  mil  florines  de  su  hacienda ,  para  re- 
partir entre  sus  valones  que  padescian  necesidad  por  la  gran 
carestía  de  la  villa,  con  los  cuales  les  socorreria,  y  los  haria 
estar  mas  prontos ,  si  los  amotinados  llegaban ;  y  luego  hizo 
repartir  cient  escudos  por  compañía ,  suplicando  al  comen- 
dador mayor  que  proveyese  del  remedio  necesario,  y  le  en- 
viase alguna  artillería. 

A  los  22  á  mediodía  el  castellano  Sancho  de  Avila ,  que 
venia  de  la  rola  de  Moquen ,  llegó  á  la  puerta  de  Sant  Jor- 
je  con  una  compañía  de  arcabuceros  á  caballo,  que  diz  que 
era  de  Mondragon ,  y  los  comisarios  que  estaban  allí  le  per- 
mitieron que  él  con  sus  criados  entrasen;  pero  pusiei'on  di- 
ficultad en  que  lo  hiciese  la  gente  de  guerra ,  sino  era  con[ 
licencia  del  gobernador,  sin  los  cuales  el  dicho  castellanoi 
no  quería  entrar,  y  así  lo  avisaron  luego  á  Mos  de  Cham- 
pañi  que  estaba  en  la  casa  de  la  villa ,  el  cual  envió  luego 
un  criado  suyo  con  orden  que  no  se  les  pusiese  impedimen- 
to, pero  que  supiesen  en  qué  parte  habia  de  alojar  la  caba- 
llería, y  si  la  tenia  del  comendador  mayor  para  meterla  en  la 
villa ,  y  ya  cuando  este  llegó  á  la  puerta  Sancho  de  Avila  ha- 
bia entrado  con  toda  su  compañía  en  el  castillo  por  la  puer- 
ta que  sale  fuera  de  la  villa ,  y  sin  decir  nada  al  gobernador 
hizo  entrar  luego  en  ella  por  el  dicho  castillo  todos  los  ar- 
cabuceros á  caballo,  los  cuales  anduvieron  por  los  barrios 
de  la  villa  que  bien  les  parcsció  tocando  las  trompetas  y  ar- 
rastrando las  banderas  que  habían  ganado  en  la  rola  de  iMo- 
quen ,  de  que  Mos  de  Champañi  no  hizo  demostración  al- 
guna ;  pero  advirtió  dello  al  comendador  mayor  con  persona 


469 

propia  por  la  posta ,  diciendo  que  le  parescia  cosa  extraña 
que  en  una  villa,  donde  habia  gobernador  y  gente  de  guerra, 
se  hiciese  caso  semejante ,  sin  su  sabiduría  y  en  tal  tiempo; 
y  en  particular  le  movió  á  escribir  esto  al  comendador  ma- 
yor, el  decir  un  soldado  de  la  dicha  compañía  alta  y  clara- 
mente por  la  villa,  que  aquella  noche  ó  por  la  mañana  lle- 
garían á  ella  cinco  mil  españoles  determinados  de  entrar  y 
quedar  aUí  hasta  ser  pagados,  y  si  se  les  estorbaba,  que  se 
apoderarían  de  las  vituallas  de  la  comarca ,  sin  dejar  en- 
trar ni  salir  persona  ni  cosa  alguna  de  la  villa ,  y  otras  bra- 
vatas infinitas  mala  propósito,  prometiéndose  el  favor  del 
castillo. 

Asimismo  advirtió  el  dicho  Mos  de  Ghampani  (que  ha- 
biendo habido  el  dia  antes  cierta  diferencia  entre  los  valones 
y  algunos  españoles  del  castillo  que  habían  entrado  en  la 
villa) ,  envió  persona  propia  al  dicho  castillo  para  que  enten- 
diese el  hecho  y  tomase  bastante  información  de  si  los  su- 
yos eran  culpados  para  castigarlos ,  á  lo  cual  respondieron 
los  soldados  del  castillo  que  los  oficiales  del  no  serian  parte 
para  estorbarles  que  no  ayudasen  á  los  amotinados  en  su  in- 
tención ,  representando  juntamente  al  comendador  mayor 
que  no  eran  estos  medios  á  propósito  para  sosegar  los  áni- 
mos de  los  vecinos  que  estaban  indignados  por  los  excesos 
de  los  del  castillo  y  por  otras  razones ,  y  que  teniéndose  re- 
celo del  (siendo  el  que  debía  defender  la  villa),  se  podía  con- 
siderar el  lenguaje  que  esto  causaría  en  el  estado  presente 
de  las  cosas ,  y  lo  que  dello  resultaría.  Que  habiendo  en 
efecto  apariencia  de  semejante  opresión  por  este  medio,  y  no 
poniendo  remedio ,  seria  fuerza  que  el  dicho  Mos  de  Cham- 
pañi  se  ayudase  del  que  tenia  en  la  villa  para  la  seguridad 
de  las  vidas ,  haciendas  y  personas  de  los  que  en  ella  habia. 
Que  habia  querido  dar  aviso  desto,  á  lin  que  la  culpa  del 


170 

mal  que  dello  podría  suceder,  se  echase  á  quien  la  meres- 
cia,  no  se  proveyendo  en  ello. 

Luego  después  despachó  otra  estafeta  al  comendador 
mayor  con  aviso  que  cierta  persona  que  se  habia  hallado  en 
el  último  encuentro  y  marchado  algunos  días  con  los  solda- 
dos amotinados ,  le  habia  dicho  que  hacian  cuenta  de  llegar 
aquella  noche  á  Herentales ,  cinco  leguas  de  Anvers ,  con 
determinación  de  forzar  la  villa  por  la  parte  del  castillo  ,  del 
cual  se  aseguraban ,  como  se  podia  creer  por  las  pláticas 
de  los  soldados  del.  Que  habia  entendido  de  los  Guzmanes 
de  los  tercios  amotinados,  que  vio  salir  del  castillo  y  pasearse 
en  la  plaza  del ,  que  reconoscían  por  donde  entraría  la  gente, 
y  con  este  aviso  tornó  á  acordar  al  comendador  mayor  la 
gran  falta  de  artillería  que  tenia  la  villa. 

Después  vino  un  atambor  que  se  habia  huido  del  tercio 
de  Sicilia  y  le  avisó  que  los  amotinados  pretendian  ser  sin 
falta  favorecidos  de  los  soldados  de  la  Gitadela ,  que  espera- 
ban asimismo  de  ser  pagados  con  esta  ocasión ,  de  que  el 
dicho  Ghampañi  advirtió  luego  con  estafeta ,  y  que  si  de 
aquellos  que  hablan  de  ser  el  amparo  no  se  podia  tener  las 
espaldas  seguras,  seria  para  poner  en  aquella  guarnición 
una  disensión  y  sombra  muy  mal  á  propósito  y  señalada- 
mente á  las  compañías  de  Frainsperg.  Que  un  criado  que 
habia  enviado  á  reconoscer  le  referia  que  los  amotinados 
hablan  de  llegar  la  misma  noche  á  Herentales,  y  que  ca- 
minaban á  grandes  jornadas ,  sin  perder  punto  de  la  noche. 
El  mismo  día  á  las  11  horas  de  la  noche  el  capitán  Arta- 
jona,  del  tercio  do  Sicilia,  vino  á  hallar  á  Mos  de  Ghampañi 
(jue  andaba  reconosclendo  sus  guardias, y  habiéndole  aparta- 
do le  dijo  debajo  de  pretexto  de  amistad  que  no  podía  dejar 
de  advertirle  que  habla  estado  aquella  tarde  en  el  castillo  y 
entendido  claramente  por  las  pláticas  de  los  soldados  y  otros. 


471 

que  sin  falta  el  dicho  Champañi  no  tenia  que  esperar  dellos 
y  menos  que  asegurarse ,  de  manera  que  le  seria  fuerza  de- 
fenderse en  las  calles  (que  son  anchas  y  muchas)  respon- 
dientes á  la  plaza  del  castillo ;  y  que  á  su  parecer  seria  ne- 
cesario para  asegurarse  del  poner  en  él  algunos  soldados  de 
otra  nación  con  los  que  allí  habia  para  impedir  la  mala  in- 
tención de  los  que  no  la  tenian  cual  convenia.  Que  estaba 
resuelto  en  ir  por  la  mañana  á  Bruselas  á  dar  aviso  dello  al 
comendador  mayor,  y  que  si  queria  lo  haria  también  por  su 
parte ,  lo  cual  le  pidió  el  dicho  Champañi ,  y  aun  se  lo  anti- 
cipó á  despachar  en  la  misma  hora  un  criado  suyo  por  la 
posta,  advirtiéndole  de  lo  que  habia  entendido  del  dicho  Ar- 
tajona ,  suplicando  al  comendador  mayor  qne  considerase  la 
consecuencia  deste  hecho,  y  loque  importaba  al  servicio  de 
S.  M.  Que  recelándose  de  que  el  castillo  en  lugar  de  ampa- 
rarlos los  habia  de  ofender  (según  los  soldados  del  decian 
públicamente),  y  teniendo  la  armada  y  los  tudescos  no  muy 
contentos,  como  se  lo  habia  avisado,  podia  pensar  en  qué 
términos  se  hallaba. 

A  los  23 ,  enlendiendo  Mos  de  Champañi  por  las  res- 
puestas del  comendador  mayor  que  estimaba  en  poco  los  in- 
convenientes de  que  él  se  temia ,  tornó  á  cargar  la  mano  con 
ello  con  persona  propia ,  escribiéndole  que  todo  lo  que  le 
habia  advertido  lo  habia  entendido  de  españoles,  y  que  pues 
ya  era  tiempo  de  hablar  claro ,  él  veia  que  á  las  mismas  ca- 
bezas no  les  pesaba  deste  alboroto ,  según  lo  declaraban  sus 
pláticas ,  así  en  el  castillo  como  fuera  del ,  y  que  tenia  esta 
sospecha  de  las  razones  de  los  mas  principales  dellos ,  re- 
presentándole los  acometimientos  y  violencias  quel  castellano 
y  los  suyos  hablan  hecho  muchas  veces  en  aquella  villa ,  ha- 
biendo él  mismo  en  persona  con  Mondragon  quitado  pública- 
mente en  la  calle  un  preso  á  la  justicia  de  la  villa,  de  lo  cual 


472 

se  enviaron  las  informaciones  al  duque  de  Alba,  que  no  hizo 
dello  demostración  alguna;  y  otra  vez  uno  de  sus  sargentos 
quitó  con  violencia  ciertas  informaciones  de  las  manos  á  otro 
olicial  de  la  villa  que  las  hacia,  y  pocos  dias  después  que  el 
dicho  Ghampañi  fué  puesto  en  su  gobierno  hizo  tomar  á  sus 
soldados  por  fuerza  la  leña  de  la  villa  para  sus  guardias  con- 
tra los  conciertos  de  la  edificación  del  castillo ,  y  que  estando 
acostumbrado  á  semejantes  acometimientos  sin  haber  cas- 
tigo, y  conferiéndolos  con  las  razones  que  al  presente  dicen, 
el  dicho  GhaHipañi  no  se  maravillará  de  cosa  que  empren- 
da, y  que  advertía  de  todo  esto  para  su  descargo. 

Que  para  no  omitir  cosa  alguna  queria  significarle  que 
|)abia  enviado  dos  de  sus  capitanes ,  el  uno  su  teniente  de 
coronel,  y  al  sargento  mayor,  que  es  español,  á  visitar  aque- 
lla misma  mañana  al  castellano ,  y  refiriéndole  que  no  esta- 
ba en  el  castillo  los  volvió  á  enviar  á  su  teniente,  para  que 
en  }q  que  se  ofresciese  procediesen  de  conformidad.  En  este 
medio  el  (Jicho  Mos  de  Ghampañi  suplicó  al  pomendador  ma- 
yqr  que  le  avisase  si  de  cualquier  manera  se  habia  de  po- 
ner en  defensa ,  aunque  el  castillo  quisiese  asistir  á  los  amo- 
tinados, porque  sabia  los  medios  y  expedientes  para  ello,  que 
era  desamparar  la  abertura  de  la  muralla,  que  no  se  podia 
(Jefender  teniendo  sospecha  del  castillo ;  pero  que  en  todo  ello 
po  haría  nada  sin  advertir  antes  á  Sancho  de  Avila ,  para  que 
supiese  por  qué  razón  se  reparaban ,  lo  cual  el  dicho  Mos  de 
Chanipañi  no  queria  intentar  sin  orden  expresa  del  comen- 
dador mayor ,  considerando  bien  la  consecuencia  de  este 
hecho.  ,>, 

^i,-  Een^ás  desto  le  avisó  que  uno  de  sus  sargentos  le  habia 
venido  á  decir  que  aquella  misma  mañana  hablan  tirado 
del  castillo  tres  arcabuzazos  en  la  n  illa  hacia  donde  estaba 
la  centinela ,  y  cjue  le  hablan  dado  á  los  pies ,  lo  cual  ej^cu- 


473 

só  el  dicho  Mos  de  Champañi ,  diciendo  que  podía  haber  su* 
cedido  por  descuido,  y  que  se  había  de  creer  así,  pues  no 
ie  habían  acertado. 

t.os  tres  arriba  dichos ,  que  Mos  de  Champañi  envió  al 
castellano,  llevaban  primeramente  cargo  de  visitarle  y  salu-^ 
darle  de  su  parte  y  darle  la  norabuena  del  felice  suceso  que 
había  tenido  en  la  rola  de  Moquen  donde  se  halló ,  y  de  ro^ 
garle  que  le  avísase  lo  que  entendía ,  así  de  la  intención  de 
los  amotinados,  como  de  los  de  su  castillo ,  por  razón  de  las 
pláticas  que  algunos  dellos  tenían  públicamente ,  esperando 
que  en  toda  conformidad  del  servicio  de  S,  M.  ayudaría  á 
estorbar  una  cosa  de  tan  mala  consecuencia  como  sería  la 
entrada  de  los  amotinados  en  la  villa  de  Anvers ,  y  que  le  ro^ 
gaba  le  hiciese  dar  los  recaudos  de  las  piezas  que  otras  ve- 
ces había  tenido  para  guarda  de  la  villa,  y  agora  estaban  en 
los  navios ,  porque  los  dichos  recaudos  y  aderezos  se  habían 
llevado  al  castillo ,  y  que  diesen  algún  medio  para  que  so 
Gonosciesen  los  soldados  que  entraban  del  castillo  en  la  vi- 
lla ,  y  se  supiese  cuales  eran  sqyos  y  cuales  no ,  porque  por 
aquella  parte  habían  entrado  muchos  españoles ,  y  convenía 
reconoscerlos  para  obedescer  al  edicto  del  comendador  ma- 
yor que  había  defendido  á  los  de  la  villa ,  que  no  recibiesen 
soldados  algunos  del  ejército,  sino  que  los  hiciesen  acudir 
luego  á  sus  banderas. 

Habiendo  preguntado  los  capitanes  que  fueron  al  castillo 
por  Sancho  de  Avila ,  y  buscándole  en  la  villa  donde  decían 
que  estaba,  volvieron  al  castillo ,  y  habiendo  hablado  al  te- 
niente, supieron  que  estaba  allí  el  castellano,  y  que  no  ha- 
bía salido,  y  él  los  llevó  adonde  estaba,  el  cual  en  viéndo- 
los se  turbó  mucho,  y  preguntó  á  los  que  allí  estaban  quién 
había  metido  en  el  castillo  aquella  gente;  pero  prosiguiendo 
su  comisión  los  dichos  capitanes  Mos  de  Vers,  primo  de  Mos 


474 

de  Ghampañi ,  y  teniente  de  sus  compañías,  comenzó  la  plá- 
tica, al  cual  respondió  el  castellano  que  no  tenia  que  ver 
con  Mos  de  Ghampañi  ni  con  su  amistad ,  y  que  no  queria 
sus  visitas ,  que  acertaria  en  dejarle ,  pues  él  dejaria  bien  al 
dicho  Ghampañi ;  y  que  guardase  su  villa  como  lo  entendía, 
que  él  sabría  muy  bien  guardar  su  castillo ;  y  que  de  lo  que 
pasaba  daria  aviso  al  comendador  mayor  cuando  le  viniese 
á  propósito  y  no  á  él;  que  no  se  hablan  de  dar  aderezos  de 
artillería  contra  los  criados  de  S.  M.  sino  contra  el  príncipe 
Dorange,  y  que  en  tal  ocasión  verla  lo  que  debia  hacer,   i 

El  dicho  Mos  de  Vers  le  replicó  que  en  todo  lo  que  ha- 
bia  tratado  con  él  no  habia  cosa  que  tocase  al  particular  de 
Mos  de  Ghampañi,  y  que  no  se  trataba  sino  del  servicio  del 
rey ,  de  manera  que  viendo  una  plática  tan  mal  á  propósito, 
sin  que  el  dicho  Mos  de  Ghampañi  le  hubiese  dado  ocasión 
para  ello ,  y  considerando  la  presente ,  despachó  al  dicho  su 
primo  por  la  posta  al  comendador  mayor  para  darle  cuenta 
de  lo  pasado  de  la  una  parte  y  de  la  otra ,  con  fin  de  preve- 
nirle para  el  suceso  que  se  podia  esperar,  escribiéndole  jun- 
tamente que  era  muy  contento  de  medirse  al  presente  con- 
forme á  lo  que  convenia  al  servicio  de  S.  M.  y  suyo,  sin 
abrazar  los  expedientes  que  con  mucha  razón  en  esto  podría. 

Pero  antes  deste  último  aviso  el  comendador  mayor  ha- 
bia resuelto  de  venir  á  Anvers,  como  lo  escribió  luego  al 
dicho  ¡Mos  de  Ghampañi ,  el  cual  después  de  llegado  á  ella 
otro  dia  por  agua,  le  representó  el  mismo  la  consecuencia 
que  anteveía  en  la  ejecución  de  lo  que  intentaban  los  amo- 
tinados ,  sí  el  castillo  los  favorescia ,  y  lo  que  esto  importa- 
ba, así  á  su  reputación  como  al  buen  suceso  de  las  cosas  de 
S.  M.,  exhortándole  á  que  se  apoderase  del  castillo,  pues  San- 
cho de  Avila  no  habia  querido  poner  en  él  otra  gente  en 
conformidad  de  la  opción  ó  escoge  que  habia  dado ,  man- 


'475 

daiulo  dos  dias  ánles  por  sus  cartas  al  dicho  Ghampañi  que 
le  diese  el  número  de  gente  y  de  la  nación  que  la  pidiese. 
Algunos  que  estaban  presentes  pusieron  en  dubda  si  dejariaQ 
entrar  en  el  castillo  al  comendador  mayor,  á  lo  cual  respon- 
dió Mos  de  Ghampañi  que  si  tenia  tan  poco  respecto  á  su 
persona  el  que  allí  estaba,  no  se  maravillaba  de  los  térmi' 
nos  que  usaba  con  él. 

En  este  medio  el  dicho  Ghampañi  continuaba  de  aten- 
der á  sus  guardias  oyendo  una  infinidad  de  pláticas,  así  en 
la  corte  del  comendador  mayor,  y  señaladamente  de  los  de 
su  séquito,  que  todos  favorescian  la  entrada  de  los  enemi- 
gos en  la  villa,  como  de  otros  capitanes ,  y  algunos  amigos 
del  dicho  Sr.  de  Ghampagni  que  tractaban  dentro  del  casti- 
llo le  advertían  que  allí  abiertamente  continuaban  su  prime- 
ra deliberación :  y  así  en  efecto  este  lenguaje  se  esparció  por 
lodo  que  la  cindadela  estarla  por  ellos ,  de  lo  cual  estabau 
muy  admirados  la  gente  de  guerra  de  la  villa ,  y  muchos 
tenian  al  Sr.  de  Ghampagni  por  consentiente  deste  trato, 
visto  que  no  se  proveía;  pero  S.  E.  habia  dicho  al  Sr.  de 
Ghampagni  que  en  ninguna  manera  convenia  repararse  con- 
tra el  castillo  ni  atrincherarse ,  por  lo  que  él  le  habia  re- 
presentado, especialmente  por  lo  que  él  le  habia  dicho  que 
él  sabia  donde  habia  mas  de  250  balas  de  lana ,  de  las 
cuales  se  podría  muy  bien  servir.  S,  E.  le  respondió  que 
aquello  era  muy  fuera  de  propósito,  pues  que  los  amotinados 
no  tenian  ninguna  artillería ,  á  lo  cual  el  dicho  Sr.  de  Chara-, 
pañi  replicó  que  él  habia  prevenido  este  expediente  por  si 
acaso  la  del  castillo  les  quisiese  dañar  para  retirar  su  gente; 
pero  viendo  que  S.  E.  no  lo  tomaba  á  buena  parte ,  él  se 
ocupó  en  ordenar  sus  guardias  con  el  menos  daño  que  era 
posible  ,  estorbando  que  no  se  hiciese  algún  otro  mal  recau- 
do por  la  villa  por  no  alterar  mas  el  pueblo,  que  ya  en  lo- 


476 

das  parles  murmuraba ;  y  así  el  dicho  Sr.  de  Gliampagni  y 
sus  capitanes,  estando  inciertos  de  la  intención  de  S,  E.,  no 
sabían  bien  en  que  resolverse,  hasta  el  domingo  á  25  que 
algunos  de  los  que  el  dicho  Sr.  de  Ghampañi  había  enviado 
á  reconoscer  la  parte  de  los  amotinados  le  avisaron  entre  las 
nueve  y  diez  horas  de  la  noche ,  que  habían  entendido  de 
los  mismos  amotinados  que  luego  después  de  media  noche 
ellos  se  hallarían  juntos  para  efectuar  su  empresa ,  de  lo  cual 
avisó  á  S.  E.,  y  que  sí  le  parecía  bien  él  haría  juntar  las  na- 
ciones, de  lo  cual  se  contentó,  no  sin  alguna  dificultad.  En 
la  misma  hora  el  dicho  Sr.  de  Ghampagní  hizo  en  ello  su 
deber,  aunque  por  ser  tan  tarde  y  día  de  fiesta  halló  tanta 
dificultad  que  su  trabajo  sirvió  de  poco. 

La  maííana  siguiente  á  26  á  las  cinco  horas  de  la  ma- 
ñana volvieron  cuatro  caballos  que  el  dicho  señor  de  Gham- 
pagní había  echado  toda  la  noche  fuera.  Los  dos  de  los  cua- 
les le  dijeron  que  habían  andado  en  medio  de  los  amotina- 
dos, y  entendido  por  cosa  cierta  (como  se  podía  bien  fiar  de 
su  relación,  según  las  señas  que  daban)  que  si  Sancho  de 
Avila  que  había  ido  hacia  los  amotinados ,  no  les  daba  á  las 
nueve  horas  de  la  mañana  respuesta  puntual  á  su  satisfac- 
ción de  parte  de  S.  Ex.*,  que  en  el  mismo  instante  se  en- 
caminarían hacia  la  villa ,  asegurados  de  todo  favor  del  cas- 
tillo, y  que  ellos  lo  pondrían  antes  dentro  la  villa  por  medio 
del  que  estorbárselo,  y  que  estaban  bien  asegurados  de  su 
ayuda  y  de  muchos  otros  que  estaban  en  la  dicha  villa. 

Luego  después  habiéndose  informado  el  dicho  señor  de 
Champañi  del  estado  de  sus  guardas,  fué  al  marqués  de  Ce- 
tona,  al  cual  después  de  haber  contado  la  relación  de  los  su- 
yos, le  dijo  que  parescia  que  S.  E.  debía  entrar  en  el  cas- 
tillo ,  y  que  no  le  quería  encubrir  que  la  mayor  parte  de  la 
villa  decía  que  era  esto  un  juego  muy  descubierto  y  ínleli- 


«77 

gencia  de  S.  E.,  que  quería  poner  los  españoles  dentro  dé 
la  villa  para  hacelles  pagar  á  los  moradores  della  de  pares- 
cer  y  con  consejo  del  dicho  marqués ,  lo  cual  todavía  no 
creia  en  manera  alguna  el  dicho  de  Champagni  por  la  con- 
secuencia y  desreputación  grande  que  esto  causaria  á  S.  E. 
en  sazón  tan  mal  á  propósito,  y  que  sucediendo  el  caso,  ora 
fuese  con  sabiduría  de  S.  E.  ó  no,  era  mucho  de  temer  que 
él  ternía  harto  que  hacer  en  persuadir  no  solamente  á  este 
pueblo ,  mas  generalmente  á  todas  las  provincias  de  acá ,  que 
no  fuese  así,  de  lo  cual  los  enemigos  harian  bien  su  negocio, 
y  aun  bambalearían  mucho  los  que  estaban  por  nosotros.  El 
dicho  señor  marqués  fué  de  parescer  que  el  dicho  señor  de 
Champañi  fuese  á  S.  E.  y  que  se  lo  dijese ,  lo  cual  hizo  á  la 
hora,  y  habiéndole  puesto  delante  no  solo  lo  que  está  dicho, 
pero  también  que  por  esta  perplejidad  él  le  qi:eria  bien  ad- 
vertir que  muchos  mercaderes  ya  habían  hecho  retirar  los 
dias  pasados  su  hacienda  en  Inglaterra  y  en  Francia  don- 
de hacían  cuenta  de  pasarse,  creyendo  que  de  una  en  una 
se  haría  este  tiro  á  todas  las  villas  de  por  acá,  y  que  el  me- 
nor mal  que  sucedería  seria  anular  de  tal  manera  la  conlra- 
tacion  que  se  podría  temer  de  no  la  poder  jamás  restituir 
con  ruina  no  solamente  desta  villa,  pero  generalmente  de 
los  Estados  de  por  acá ,  y  que  seria  posible  que  este  mal  se 
extendiese  mas  lejos,  y  así  volvió  á  suplicar  muy  instante- 
mente á  S.  E.  que  él  se  quisiese  poner  dentro  el  castillo, . 
porque  la  menor  sospecha  del  mundo  que  tuviesen  los  que 
se  pusiesen  á  las  defensas  de  le  tener  por  contrario,  esto  les 
pornía  en  compromiso  todo  el  suceso  deste.  A  esto  respondió 
S.  E.  que  él  había  venido  para  guardar  la  villa,  y  que  él  no 
quería  mostrar  temor  ni  defenderse  ó  sospechar  del  castillo; 
y  como  el  dicho  señor  de  Champagni  añadió  que  si  le  placía 
él  tomaria  cuatro  piezas  Tijeras  que  habia  llevado  á  los  bale- 


478 

les,  y  que  en  menos  de  media  hora  las  ternía  á  punto  con  lo 
poco  que  él  tenia  dentro  la  villa.  Ni  esto  ni  las  otras  diligen- 
cias que  el  señor  de  Ciíampañi  propuso  no  agradaron  á  S,  K., 
antes  le  reprendió  porque  tan  abiertamente  á  media  noche 
había  hecho  repartir  la  pólvora  á  sus  soldados,  diciendo  que 
Sancho  de  Avila  estaba  con  los  amotinados,  que  procuraría 
de  aquietarlos,  y  que  él  no  dejaría  de  advertir  á  tiempo  todo 
lo  que  fuese  necesario,  y  que  así  no  convenia  alterar  la  villa; 
añadiendo  S.  Ex/  que  él  era  de  opinión  que  los  amotinados 
harían  alguna  muestra  al  luengo  de  las  murallas  de  la  villa; 
pero  que  no  se  desvergonzarían  en  pasar  mas  adelante.  Y 
como  el  dicho  señor  de  Ghampagni  le  dijo  que  seria  posible 
no  poder  detener  los  soldados  viéndose  tan  cerca,  ó  que  vién- 
dolos asegurados ,  los  otros  los  tomarían  á  su  pié  al  luengo 
del  castillo  ó  á  la  una  y  otra  parte  de  la  Junta,  enfrente  de 
donde  se  cierra  con  el  castillo ,  que  había  dos  portillos  muy 
cómodos ,  á  los  cuales  los  del  castillo  jamás  dejaban  acercar 
nuestras  centinelas;  S.  E.  le  aseguró  que  no  había  para  que 
creer  que  los  amotinados  se  olvidasen  tanto  de  si  mismos ,  y 
que  nuestra  genle  debria  entretenerse  hasta  la  necesidad, 
de  manera  que  el  señor  de  Ghampañi  no  sabia  como  enten- 
der este  lenguaje;  pero  de  lo  que  habia  oído  á  S.  E.  creia 
que  su  intención  era  que  no  se  debiese  irritar  á  los  amoti- 
nados, de  manera  que  él  y  su  gente  se  veían  puestos  en  la 
discreción  y  voluntad  de  los  que  venían ,  sin  que  les  fuese 
permitido  de  se  prevenir  con  contrarios  y  adversarios  delante 
y  dentro  de  la  villa,  y  en  el  castillo  que  estaban  al  flanco  de 
su  defensa. 

Luego  después  á  las  siete  horas  llamó  S.  E.  al  señor  de 
Ghampañi,  y  en  presencia  del  magistrado  le  dijo  que  él  se 
habia  venido  á  poner  en  su  villa ,  asegurándose  que  los  amo- 
tinados no  le  perderían  el  respeto  tanto  que  quisiesen  em- 


prendella;  mas  que  todavía  por  evitar  cualquier  mal  designo 
que  pudiesen  tener,  aunque  no  fuese  mas  de  la  molestia  que 
darian  alderredor  de  la  villa ,  les  rogaba  que  ellos  quisiesen 
hacer  esfuerzo  en  hallar  hasta  200  mil  escudos  por  lo  me- 
nos, sobre  ciertas  condiciones  que  aquí  no  hacen  al  caso,  y 
cometió  al  dicho  señor  de  Champagni  que  fuese  con  ellos  á 
la  casa  de  la  villa,  y  que  les  asistiese  para  la  dirección 
deslo. 

Estando  en  esto,  ya  cerca  de  las  11  horas,  vinieron  á 
avisar  al  dicho  señor  de  Champagni  que  los  amotinados  es- 
taban muy  cerca  de  la  Junta ,  conducidos  por  Sancho  de  A\  ila 
y  acompañados  de  algunos  archeros  de  S.  E.  que  les  habian 
sahdo  á  recibir  por  la  puerta  de  Santiago,  que  entonces  es- 
taba abierta  y  la  de  Sanct  Berg  cerrada ,  como  lo  confiesan 
muchos,  así  burgeses,  como  délos  que  estaban  en  la  muralla, 
y  los  de  la  defensa ,  y  que  desla  manera  como  se  cerró  la  di- 
cha puerta ,  ellos  fueron  conducidos  al  luengo  del  foso  hasta 
el  portillo  que  he  dicho  entre  la  Junta  y  el  castillo,  á  la  cual 
habiéndose  acercado  poco  á  poco,  comenzando  á  querer  en- 
trar los  valones  se  determinaron  á  defendella ;  pero  un  es- 
pañol llamado  Rojas  con  otro  les  gritaron  que  no  tirasen ,  y 
que  S.  E.  se  lo  mandaba,  de  manera  que  llegando  el  dicho 
señor  de  Champañi  cerca  de  la  plaza  de  la  Junta,  y  enten- 
diendo esto  mandó  al  cuerpo  de  guardia  de  Sant  Bercg  que 
se  adelantase  y  que  tocase  arma,  y  que  con  toda  presteza 
viniese  al  señor  comendador  mayor,  para  avisalle  de  lo  que 
Sancho  de  Avila  hacia ,  para  entender  si  era  orden  suya ,  y 
se  volviese.  Luego  S.  Ex."  se  puso  en  la  dicha  plaza,  el  cual 
viendo  que  el  capitán  Vers  con  el  capitán  Stercli  y  su  com- 
pañía iban  para  rebutar  los  que  ya  habian  entrado,  que  no 
eran  sino  hasta  50  ó  40,  les  mandó  que  se  retirasen  y  que 
detuviesen  la  demás  gente  de  guerra  pacífica  en  sus  cuerpos 


m 

(le  gnarda,  mandantlo  ío  rílismo  al  dicho  señor  dé'  Champag- 
ni,  y  que  luego  hiciese  retirar  lambien  los  alemanes,  y  (pie 
por  la  villa  él  diese  orden  que  no  hubiese  alguna  alteracími; 
mandamiento  que  le  parescic)  muy  duro,  todavía  reconos- 
ciendo  la  obediencia  que  debia ,  y  estando  incierto  del  desig- 
no de  S.  É.i  fué  luego  á  dar  esta  orden,  y  hizo  tanto  que 
el  pueblo  se  aquietó ,  que  ya  se  movia  por  todas  partes ,  y 
el  dicho  señor  de  Champagni  se  retiró  para  este  efecto  á  la 
casa  de  la  villa. 

Después  viendo  todas  las  cosas  harto  quietas ,  Como  S.  É. 
íe  envió  á  mandar  que  diese  aposento  á  los  dichos  españoles, 
él  lo  fué  á  buscar  sobre  la  plaza  delante  del  castillo  donde 
todos  los  amotinados  se  habian  puesto  en  escuadrón  y  entra- 
ban ya  en  la  calle  para  aposentarse  eti  la  Mera  y  en  la  plaza 
de  la  villa.  Entonces  S.  E.  mostró  grandísimo  sentimiento 

del  poco  respeto  que  los  amotinados  le  habian  tenido,  y  pre- 
guntándole S.  E.  cómo  habian  entrado,  y  diciéndole  la  forma 
de  la  venida,  y  que  el  mandamiento  habia  emanado  de  S.  E., 
el  cual  él  negó ;  y  el  marqués  de  Celona ,  que  se  hallaba 
allí  cerca,  dijo  que  habia  procedido  de  los  dos  soldados; 
pero  que  ya  los  amotinados  estaban  dentro.  A  lo  cual  el  dicho 
señor  de  Champani  replicó  que  él  no  pensaba  ser  así ,  antes 
mucho  rato  después  pudiera  él  rebutar  los  que  habian  en- 
trado. Todavía  viendo  el  grande  enojo  que  S.  E.  tenia,  no 
trató  mas  dello ,  la  cual  se  quejaba  de  que  Sancho  de  Avila 
estando  ya  en  la  muralla  le  habia  dicho  que  seria  bien  que 
hiciese  entrar  gente  dentro  del  castillo  para  asegurarse  del, 
y  representándole  después  el  señor  de  Champagni  que  po- 
drían mal  alojar  todos  juntos  sin  tocar  una  nación  con  otra, 
y  que  él  entendía  que  se  daban  algunos  cuarteles  de  su  gente 
á  los  que  de  nuevo  habian  entrado ,  deseando  saber  lo  que 
habia  de  hacer,  S.  E.  le  dijo  que  él  retirase  su  gente  en  la 


«Si 

nueva  villa  para  que  estuviesen  mas  lejos  de  los  amotinados, 
lo  cual  obedesció  á  la  hora ,  y  cerrando  los  cuarteles  esperó 
la  noche ,  en  la  cual  entendió  que  los  amotinados  querian 
echar  á  S.  E.  y  á  su  corte  fuera ,  y  procurar  de  apoderai-se 
de  la  persona  del  dicho  señor  de  Ghampagni  para  matalle,  y 
después  echar  los  valones,  de  lo  cual  avisó  á  S.  E. ,  apode- 
rándose de  la  casa  de  los  Eslerlines  y  de  un  sitio  harto  aven- 
tajado. 

La  siguiente  mañana ,  entendiendo  mas  y  mas  la  inso- 
lencia de  los  amotinados  y  el  poco  respeto  que  habían  tenido 
á  S.  E.,  no  se  habiendo  movido  de  su  cuartel  por  contener 
su  gente,  envió  á  Mos  de  Aychen,  su  sobrino  ,  gobernador 
de  Dola ,  á  S.  E.  para  avisalle  que  muchos  burgeses  hablan 
venido  á  él  para  saber  si  tomarían  las  armas  por  ser  el  caso 
afrentoso  y  en  apariencia  de  muy  grande  confusión.  Que  si 
S.  E.  queria  que  él  haría  diestramente  armar  los  burgeses,  y 
después  con  la  gente  que  él  tenia  daría  sobre  los  amotinados, 
y  que  él  estaba  cierto  de  echallos  de  la  villa,  ó  de  les  hacer 
costar  caro  el  atrevimiento,  juntándose  á  esto  que  él  tenia 
la  armada  á  su  lado ,  de  la  cual  estaba  tan  asegurado  que 
podría  sacar  el  artillería  para  sacar  á  S.  E.  de  mano  destos, 
los  cuales  á  la  fin  con  poca  reputación  suya  y  de  su  nación 
podrían  traer  los  negocios  de  S.  M.  en  gran  ruina  si  lo  de- 
más del  país  á  ejemplo  desto  se  comenzase  á  amotinar ,  pues 
quedando  este  caso  sin  castigo  podría  causar  una  general  al- 
teración por  todo  el  país ,  de  lo  cual  él  no  podía  dejar  de 
acusar  á  S.  E,  por  su  descargo ,  viéndose  en  lugar  harto 
aventajado  y  señor  de  puertas ,  así  á  la  tierra  como  á  la  ma- 
rina ,  para  poner  tanta  gente  de  socorro  cuanta  S.  E.  qui- 
siese. A  lo  cual  le  envió  á  mandar  que  no  se  moviese ,  antes 
por  todas  las  vías  posibles  apaciguase  el  pueblo ,  el  cual  no 
le  dejaba  en  paz  por  tomar  las  armas.  Todavía  él  hizo  todo 
Tomo  XXX.  oí 


482 

su  deber  para  divertirle  viendo  la  voluntad  de  S.  E. ,  acon- 
sejando al  magistrado  por  diversos  medios  y  vias  que  procu- 
rase satisfacer  al  medio  propuesto  por  S.  E. ,  porque  toman- 
do las  armas ,  aunque  fuesen  superiores,  no  seria  sin  una 
gran  mortandad  de  ellos  mismos ;  y  si  acaso  no  fuesen  mas 
fuertes ,  demás  de  la  carnicería  que  se  baria  en  ellos ,  no  les 
iba  menos  que  ser  saqueados  y  ver  la  general  desolación  de 
toda  su  villa ,  y  mas  que  de  cualquier  manera  ellos  incurri- 
rían en  muy  grande  indignación  de  S.  M.  por  no  baber 
guardado  el  mandamiento  de  su  gobernador  general ,  que 
sabia  mejor  lo  que  les  con  venia  y  á  lo  demás  del  pais  que 
ellos  mismos,  y  que  cuando  fuese  tiempo  él  se  lo  sabría 
mandar ,  y  que  entonces  su  defensa  seria  legítima ,  sin  que 
se  imputase  á  tumulto  popular,  y  cualquier  otro  suceso  ter- 
nia  excusa.  Con  estas  razones  los  contuvo  el  dicbo  señor  de 
Cbampagni. 

Esta  misma  mañana  los  españoles  por  tres  veces  bicie- 
ron  semblante  de  venirle  á  acometer;  pero  no  lo  lucieron, 
y  luego  después  el  electo  con  sus  soldados  enviaron  á  decir 
al  dicho  señor  de  Cbampagni  que  deseaban  que  él  se  saliese 
de  la  villa  con  su  gente ,  á  lo  cual  respondió  que  él  no  babía 
de  obedecer  sino  á  solo  S.  E. ,  y  entretanto  que  no  le  man- 
daba otra  cosa ,  él  y  los  que  estaban  en  su  compañía  bacian 
cuenta,  ó  de  guardar  la  plaza  que  S.  E.  les  babia  ordenado, 
ó  de  morir  en  ella.  De  allí  á  un  rato  vino  el  marqués  Viteli 
de  parte  de  S.  E.  al  dicbo  Cbampagni  con  un  billete  de  su 
mano  en  que  dccia  que  biciese  lo  que  el  dicho  marqués ,  ó 
D.  Alejandro,  capitán  de  su  guarda,  y  Hernando  Sastre  le 
dirían  de  su  parle ,  y  fué  que  él  biciese  salir  su  gente  de  la 
villa  como  los  amotinados  lo  pedían ;  y  visto  el  señor  de 
Cbampagni  que  á  sus  réplicas  el  marqués  le  dijo  que  aque- 
llos eran  la  mejor  gente  de  guerra  que  S.  M.  tenia,  y  que 


era  menester  conservallos ,  él  se  rindió  ú  la  obediencia, 
viendo  asimismo  que  su  presencia  y  la  de  su  gente ,  pues  no 
se  queria  otra  ayuda ,  no  serviría  sino  de  mover  al  pueblo 
mas  y  desviarle  del  deseo  y  voluntad  de  S.  E. ,  y  así  pen- 
sando de  salir  por  la  parte  de  Flándes  para  poder  todo  á  un 
tiempo  echar  su  gente  dentro  de  los  bajeles  á  fm  que  no  fue- 
sen salteados  por  las  espaldas ,  todavía  después  de  haber  re- 
conoscido  el  camino  de  Ectreren ,  viendo  ser  á  propósito 
para  no  ser  ocupado,  hizo  que  le  tomase  su  gente,  porque 
allí  estaba  mas  á  la  mano  para  todo  lo  que  S.  E.  mandase, 
habiéndole  enviado  á  decir  poco  antes  con  el  dicho  Mos  de 
Aychen,  su  sobrino,  que  si  S.  E.  holgaba  él  se  quedaría 
dentro  la  villa  ó  volvería  á  ella  después  de  haber  asegurado  y 
acomodado  su  gente,  sin  tener  cuenta  con  las  amenazas  de  los 
amotinados ,  á  los  cuales  Sancho  de  Avila  ó  los  suyos  debían 
haber  dicho  que  él  habia  pedido  la  artillería  al  castillo  para 
matallos ,  y  los  burgeses  habían  ofrescido  de  hacelle  la  guar- 
dia en  el  número  que  quisiese  hasta  4,000  hombres  para 
retener  su  persona,  atento  que  los  amotinados  habian  conju- 
rado su  muerte,  lo  cual  él  temía  bien  poco,  como  pudiera 
hacer  servicio  á  S.  E.,  dejando  las  cosas  bien  encaminadas 
para  hacer  juntar  dinero  por  la  parte  de  la  villa,  á  lo  cual  él 
pensaba,  como  está  dicho,  que  su  ausencia  serviría  mas  que 
la  presencia ,  viendo  á  los  burgeses  con  la  voluntad  dicha; 
pero  que  él  no  se  descartaría  por  estar  siempre  pronto  á 
todos  los  mandamientos  de  S.  E. ,  y  así  se  partió  y  condució 
su  gente  á  Ectreren. 

Esto  es,  sin  haber  mas  ni  menos,  todo  lo  que  ha  pasado 
en  respecto  del  dicho  señor  de  Champañi ,  cuanto  á  la  des- 
orden sucedida  en  la  villa  de  Anvers  el  fm  del  tercer  año  que 
él  tuvo  el  gobierno  della  en  nombre  de  S.  M. ,  sin  que  jamás 
haya  habido  allí  emoción  alguna  ni  sombra  della  en  todas 


estas  últimas  alteraciones,  aunqucs  Malinas  y  Dermonda, 
villas  cercanas,  y  muchas  otras  del  pais  csliiviescn  en  poder 
de  los  enemigos  y  estos  contornos  todos  llenos  de  sus  arma- 
das. Fecha  en  Ectreren  á  28  de  abril  1574. 


Copia  de  cavia  oriijinal  del  comendador  m'Ujor  de  Castilla 
¡).  Luis  de  llequesens  á  S.  M.,  fecha  en  Amhéres  á  15 
de  mayo  de  1574. 

Recibida  en  27  del  mismo. 

Sobre  el  mismo  asimto. 


\       "Lcidas  en  Consejo. 


tar^^^s'"' '''""  i       Respondida  á  7  de  junio ,  y  el  cor. 
(  reo  partió  á  16  del  mismo." 

(Archivo  general  de  Simancas. — Secretaría  de  Estado,  legajo 
'Ijícoo  ítíyir  núm.^Ti.) 

S.  C.  R.  M. 

^?m  *f-Con  un  correo  que  despaché  tí  último  del  pasado  di 
cuenta  á  V.  M.  del  término  en  que  quedaba  el  motin  de  los 
españoles ,  y  pensé  no  habella  de  dar  hasta  poder  decir  que 
era  acabado ,  y  aunque  en  otros  motines  no  hay  que  tra- 
tar de  las  particularidades  que  en  ellos  pasan,  ha  sido,  y  es 
este  tan  trasordinario  y  de  que  han  nascido  tantos  inconve- 
nientes y  están  tan  cerca  de  suceder  otros  mayores  (1),  que 

(1)  Todo  lo  de  bastardilla  está  en  cifra,  y  descifrado  en  la  mis- 
ma carta. 


me  persuado  que  V.  M.  se  servirá  de  saber  algunos  particu- 
lares que  sean  de  tanta  pesadumbre ,  y  así  referiré  los  que 
ha  habido  después  de  la  partida  del  dicho  correo. 

Fuese  continuando  en  tractar  con  estos  que  se  contenta- 
sea  con  un  número  cierto  de  pagas  por  la  dificultad  que  ha- 
bía en  averiguar  sus  cuentas ,  y  jamás  han  querido  quebrar 
en  cosa  ninguna,  sino  que  se  les  ha  de  pagar  enteramente 
todo  el  sueldo ,  y  lo  que  se  les  ofreció  por  el  servicio  de  los 
huéspedes ,  y  las  pagas  de  todos  los  muertos  y  otras  cien  mil 
sinrazones,  viendo  las  cuales  y  que  cadadia  iban  multiplicando 
inconvenientes,  rae  aconsejaron  todas  las  personas  con  quien 
en  esto  podia  tomar  parescer  que  se  les  ofreciese  el  averi- 
guar su  cuenta  y  pagalles  con  que  ellos  diesen  su  muestra 
quietamente,  no  consentiendo  los  robos  de  sus  oficiales,  que 
en  esta  parte  habian  ellos  enviado  á  ofrescer  que  harian  ma- 
ravillas, ahorrando  á  V.  M.  muchos  dineros:  y  para  esto 
nombraron  dos  personas  por  compañía ,  que  con  juramento 
declarasen  los  que  no  habian  de  pasar,  y  se  contentaron  de 
dar  la  muestra  y  de  tomar  cinco  pagas  en  ropa ,  con  que 
todo  lo  demás  de  sus  cuentas  se  les  diese  en  dinero,  y  pa- 
resció  á  todos  que  la  mayor  lanza  que  con  estos  se  habia  de 
romper  era  reducillos  á  esta  muestra ,  y  comenzar  á  hacer 
sus  cuentas ,  y  que  después  se  facilitarían  mas  los  otros  me- 
dios. 

Envié  á  llamar  á  los  que  habian  diputado ,  que  eran  casi 
cien  personas ,  y  encargúeles  cuanto  pude  que  mirasen  por 
el  servicio  de  V.  M.  sin  temor  de  sus  capitanes  y  oficia- 
les ,  ofresciéndoles  que  haciendo  lo  que  debian  les  daria  pla- 
zas en  los  castillos,  ó  los  dejaría  pasar  á  otras  compañías,  y 
aun  les  daria  licencia  para  ir  á  España  y  otras  muchas  co- 
niodidades ,  y  habiendo  ofrescido  que  ellos  harian  muchas, 
se  concertó  se  lomase  la  muestra  á  dos  de  mavo,  v  el  dia 


480 

antes  se  dieron  priesa  á  hacer  los  capítulos  de  que  aquí  en- 
vío copia ,  como  lo  va  también  de  lo  que  yo  les  respondí, 
que  paresció  que  era  fuerza  venir  en  aquello  por  atajar  tanto 
daño. 

Hecho  esto  se  juntaron  el  dia  concerlado  todos  en  la  Bol- 
sa á  dar  la  muestra,  donde  yo  habia  hecho  antes  cerrar  las 
puertas,  y  acomodalia  de  manera  que  se  pudiese  tomar  á  un 
mismo  tiempo  por  ocho  manos,  y  habiéndoles  primero  su 
electo  leído  las  respuestas  que  yo  di  á  sus  capítulos,  se  tor- 
naron muchos  á  alborolar  y  salirse ,  porque  no  se  les  decia 
claro  que  se  pagarían  luego  los  testamentos,  y  en  entendién- 
dolo fui  yo  allá,  y  los  hice  tornar  á  recoger,  y  dentro  de  la 
dicha  Bolsa  les  hablé  asegurándoles  que  se  haría  en  aquello 
cuanto  fuese  justo;  y  en  fin,  se  resolvieron  á  dar  su  mues- 
tra quietamente ,  y  dejándola  comenzada  me  fui  al  castillo  á 
hablar  á  aquellos  soldados  y  hacer  que  se  les  tomase  al  mis- 
mo tiempo  también  muestra ,  y  el  dia  antes  envié  comisarios 
á  lomalla  á  los  castillos  de  Gante  y  Valencianas  donde  hay 
dos  compañías  destas  viejas,  y  á  otras  seis  de  las  mismas 
que  están  en  diferentes  presidios,  y  no  se  habían  amotinado, 
y  para  que  no  lo  hiciesen  les  escribí  que  se  baria  con  ellos 
lo  mismo  que  se  hiciese  con  estotros  y  aun  mas,  y  despaché 
correo  á  Holanda  para  que  al  mismo  tiempo  se  tomase  mues- 
tra á  la  infantería  que  allí  está,  que  es  la  que  últimamente 
vino  de  Italia ,  aunque  se  les  había  tomado  cuatro  dias  an- 
tes, y  acabóse  la  muestra  de  aquí  bien  temprano,  y  aunque 
no  hicieron  todos  los  diputados  que  esta  gente  nombró  lo 
que  habían  ofrescido,  hubo  algunos  que  lo  hicieron  bien, 
aunque  todavía  se  pasarían  hartas  plazas  injustas;  fué  gran 
número  deltas  las  que  se  borraron ,  puesto  caso  que  al  alis- 
tar fuerzan  que  se  pasen  algunas,  y  díjome  el  contador  Cas- 
tellanos que  se  ahorraban  en  esta  muestra  á  V.  M.  gran 


487 

suma  de  dinero,  si  la  cuenta  se  pudiera  hacer  jusla  confor-. 
me  á  ella ,  y  así  lo  paresce  en  el  descontento  de  los  capitanes- 
como  luego  diré. 

En  entrando  estos  amotinados  aquí  di  orden  á  los  maes- 
tros de  campo ,  capitanes ,  alféreces  y  otros  oficiales,  que  los 
habían  echado  de  sí ,  y  venían  una  jornada  atrás ,  que  se 
metiesen  en  Liera  con  las  banderas,  que  por  ser  dos  leguas 
de  aquí  estaban  á  mano  para  cualquier  caso  que  se  hubiese 
de  tratar;  y  habiendo  después  enviado  por  los  maestros  de 
campo  D.  Hernando  de  Toledo  y  D.  Gonzalo  de  Bracamonte, 
porque  Julián  estaba  todavía  acabando  los  fuertes  de  Sancta 
Gertrutbergue  ,  me  resolví  con  ellos  después  de  habellos 
puesto  delante  con  muchas  razones  la  obligación  que  leniaa 
al  servicio  de  Dios  y  de  V.  M.  en  que  hablasen  á  los  capi- 
tanes para  que  cada  uno  dellos  enviase  la  lista  de  los  solda- 
dos que  tenían  firmadas  de  sus  nombres  y  juradas,  y  yo  es- 
cribí á  los  dichos  capitanes  la  carta  de  que  aquí  va  copia,  de 
que  se  ofendieron  y  enviaron  aquí  cuatro  capitanes,  uno  de 
cada  tercio  en  nombre  de  los  demás  á  hablarme  el  dia  antes 
de  la  muestra,  mostrando  mucho  sentimiento  de  que  man-/ 
dándoles  yo  dar  las  listas  firmadas  y  juradas  se  les  hubiese 
de  tomar  otra  muestra,  y  que  no  querían  poner  su  honra  á 
peligro  de  que  un  comisario ,  ó  un  oficial  del  contador ,  ó 
un  soldado  de  los  que  estos  diputaroQ  les  borrasen  una  pla- 
za de  las  que  ellos  afirmasen  ser  ciertas,  y  que  ellos  se  con- 
fesaban conmigo  de  que  hasta  aquí  se  habían  aprovechado 
de  algunas  como  era  costumbre,  por  ser  imposible  susten- 
tarse con  sus  sueldos  en  tiempos  tan  caros ,  y  que  no  habia 
hombre  de  ellos  que  tuviese  un  real ,  y  que  no  debiese  mu- 
chos ,  y  que  si  yo  lo  fiaba  enteramente  dellos  que  harían 
mas  rigor  contra  sí  que  lodos  los  oficiales  de  hacienda;  pero 
que  si  se  les  habia  de  tomar  otra  muestra  sin  hallarse  ellos 


présenles  que  no  darían  listas  firmadas,  antes  me  pedían 
que  les  descargase  de  las  compañías  y  que  servirían  á  V.  M. 
de  soldados  particulares. 

Yo  les  respondí  al  principio  muy  blandamente,  ponién- 
doles delante  con  cuantas  razones  supe  los  inconvenientes 
que  nacían  destc  motín ,  y  que  á  caso  tan  trasordinario  era 
menester  que  lo  fuesen  también  los  remedios  ,  y  cuan  per- 
suadido estaba  yo  que  ellos  podrían  dallos  sí  quisiesen  apre- 
tar á  sus  amigos ,  y  sobre  el  hurtar  les  hice  una  muy  larga 
reprensión ,  ofrescíéndoles  al  cabo  de  cerrar  los  ojos  á  lo 
pasado,  con  que  en  esta  ocasión  y  en  las  de  adelante  hicie- 
sen lo  que  debían ,  y  les  dije  que  yo  holgara  mucho  de  que 
se  tomara  la  muestra  con  su  presencia ,  pero  que  los  amoti- 
nados no  daban  á  esto  lugar,  y  que  si  ellos  diesen  listas  ver- 
daderas no  tenían  que  temer  de  que  nadie  les  borrase  plaza. 

En  fin,  después  de  haber  pasado  muchas  demandas  y 
respuestas  en  mas  de  dos  horas  que  estuvieron  conmigo, 
perseveraron  en  su  obstinación ,  y  yo  les  dije  que  se  volvie- 
sen á  Liera,  que  esto  parescía  ya  motín  de  capitanes ,  y  que 
yo  pondría  en  ello  remedio.  Fueron  se  y  enviaron  aquella  no- 
che muchas  listas ,  pero  sin  firmar  ni  jurallas ,  y  otro  día 
se  tomó  la  muestra  en  la  forma  que  he  dicho ,  y  los  capíla- 
nes  lo  sinlíeron  tanto  que  me  escribieron  con  D.  Gonzalo  de 
Bracamente  la  carta  de  que  aquí  va  copia,  pidiendo  que 
querían  dejar  todos  sus  compañías ,  y  cierto  yo  holgara  har- 
to de  podellos  tener  el  envile  si  fuera  en  otro  tiempo ,  y  en- 
vié luego  por  D.  Gonzalo,  y  le  dijo  el  justo  sentimiento  que 
yo  podía  tener  de  los  capitanes,  y  que  procediesen  de  otra 
manera,  porque  sí  no  se  enmendaban  no  me  contentaría  con 
quitalles  las  compañías,  sino  con  cortalles  las  cabezas.  En 
tin ,  después  acá  hablan  diferentemente ,  y  creo  están  harto 
temerosos  de  la  reformación  ;  i)ero  no  sé  que  se  enmienden 


489 

sus  alféreces  y  oficiales  en  el  dar  de  las  cuentas,  que  hacen 
en  ello  cosas  terribles. 

Tomada  la  dicha  muestra  hice  poner  ocho  mesas  en  un 
monesterio  con  los  oficiales  que  la  tomaron  ,  y  con  otras  per- 
sonas que  yo  nombré  para  hacer  conlralistas  para  que  allí 
fuesen  todos  á  alistarse  y  averiguar  las  cuentas,  ordenándo- 
les que  se  ocupasen  en  esto  doce  horas  cada  dia,  y  pasan 
muy  pocas  que  yo  envío  á  solicitallos,  y  asimismo  se  dio  la 
mejor  orden  que  se  pudo  en  que  se  comenzase  á  rescebír  la 
ropa. 

Estuvieron  con  esto  dos  ó  tres  dias  algo  quietos ,  en  los 
cuales  se  vinieron  aquí  sin  orden  lo3  mas  capitanes  y  oficiales, 
y  también  volvió  Julián ,  y  creo  que  es  el  que  menos  culpa 
tiene  en  este  motin ,  y  mas  cólera  con  los  que  le  hacen ,  y 
así  es  muy  malquisto  de  los  soldados ;  y  viendo  que  anda- 
ban todos  duendos  entre  ellos ,  ordené  á  los  que  quedaba  n 
en  Liera  que  viniesen  aquí,  por  ver  si  cada  uno  dcilos  po- 
dría reducir  sus  amigos ,  y  enarbolar  sus  banderas ,  y  como 
los  amotinados  lo  entendieron  tocaron  arma  con  el  mayor 
alboroto  del  mundo,  y  comenzaron  á  hacer  100  mil  desórde- 
nes ,  y  echaron  bando  que  todos  los  oficiales  saliesen  dentro 
de  una  hora  so  pena  de  la  vida,  y  fueron  á  romper  las  puertas 
de  las  casas  de  algunos  dellos  especialmente  las  de  Julián, 
cuya  persona  corrió  harto  peligro,  y  dijeron  contra  él  mil 
injurias  y  palabras  desacatadas.  En  fin,  fué  fuerza  que  él  y 
los  demás  se  saliesen  con  priesa,  y  á  la  tarde  tornaron  á 
echar  bando  que  volviesen  los  alféreces  por  la  averiguación 
de  las  cuentas ,  y  no  sé  si  fuera  mejor  que  no  estuvieran 
aquí  según  ellos  lo  hacen. 

Enviaron  este  dia  desde  su  cuerpo  de  guardia  muchos 
billetes  á  su  electo  y  consejo  en  la  sustancia  de  los  que  de 
aquí  va  copia.  En  fin,  el  pedir  estos  para  su  seguridad  fir- 


490 

ma  de  V.  M.  es  quererse  estar  aquí  bellaqueando  cien  años. 
He  andado  todos  estos  dias  buscando  y  pensando  cien 
medios  para  cumplir  con  estos,  y  queriéndoles  proponer  el 
que  adelante  diré ,  le  traté  entre  otros  con  Sandio  de  Avi- 
la, diciéndole  que  si  se  aseguraba  que  ya  que  los  soldados 
del  castillo  babian  hecho  tan  gran  maldad  como  dejar  en- 
trar á  estotros ,  lo  querrían  enmendar  con  contentarse  con 
menos  pagas,  ofreciéndoles  el  cumplimiento  de  las  demás  en 
un  breve  término  ,  para  que  con  esto  diese  ejemplo  á  los 
otros.  Díjome  que  tenia  por  cierto  que  lo  harian ,  y  que  él  se 
lo  propondría  como  dice  que  lo  hizo  aquella  tarde  al  tiempo 
que  metian  su  guardia,  y  que  todos  le  respondieron  que 
eran  muy  contentos,  y  estando  escribiendo  la  carta  que  so- 
bre ello  hablan  de  firmar,  á  las  diez  de  la  noche  se  amotina- 

:  ron  los  del  dicho  castillo ,  y  tocaron  arma ,  en  la  cual  se  pu- 
sieron también  todos  los  amotinados  que  están  en  la  villa, 
no  sabiendo  lo  que  era ,  y  los  del  dicho  castillo  tiraron  al- 

¡  gunas  piezas  de  artillería,  y  muchos  arcabuzazos,  y  hicie- 
ron dentro  del  su  electo ,  y  sargenlo  mayor  y  otros  oficiales 
de  motin  aparte  y  quitaron  las  llaves  á  Sancho  de  Avila  y 
se  apoderaron  de  las  municiones  y  victuallas ,  y  dijeron  des- 
de la  muralla  á  estotros  que  hiciesen  bien  sus  negocios  que 
aquel  castillo  estaba  por  V.  M,  y  por  los  soldados.  En  fin,  se 
pasó  toda  la  noche  sin  que  yo  pudiese  saber  las  particulari- 
dades que  habia  habido,  y  al  amanescer  envió  Sancho  de 
Avila  á  referir  las  que  he  dicho ;  y  como  se  hablan  ya  aquie- 
tado y  vuóllole  las  llaves,  habiendo  muchos  buenos  que  ha- 
blan amenazado  á  los  ruines ,  y  que  él  les  habia  ofrescido  el 
perdón  á  todos ,  y  que  pedían  que  fuese  allí  Chapín  Vitelo  á 
asegurárselo  de  mi  parte,  á  cuya  causa  envió  al  electo  por 
sacalle  del  castillo ,  y  según  afirma  Sancho  de  Avila  con  de- 
terminación de  que  no  volviese  mas  á  él ,  y  después  de  sali- 


491 

do  el  dicho  electo  tornaba  el  sargento  mayor  á  inquietar  el 
dicho  castillo ,  y  el  alférez  del  le  dio  luego  de  puñaladas ,  y 
echó  en  el  foso  y  los  demás  se  aquietaron. 

Subcedió  en  esto  otra  desgracia,  por  la  cual  se  deja  bien 
considerar  cuan  suelto  anda  el  demonio  en  este  trabajo,  po- 
niendo tantos  tropiezos  por  vias  tan  extrañas,  yes  que  un 
clérigo  español  del  dicho  castillo,  con  quien  Sancho  de  Avi- 
la envió  á  este  electo ,  no  nos  dijo  al  marqués  ni  á  mí ,  que 
entrambos  le  hablamos,  que  no  habia  de  volver  allá,  antes 
preguntándole  como  se  le  habian  dejado  sacar,  referió  que 
habia  dicho  en  la  puerta  que  le  volvería  luego ,  y  habiendo 
yo  hablado  con  el  dicho  electo ,  y  asegurádole  la  vida  si  lo 
acababa  de  aquietar,  nos  paresció  al  marqués  y  á  mí  que 
pues  él  habia  de  ir  á  hablar  á  los  soldados  llevase  consigo  al 
dicho  electo ,  como  lo  hizo  dentro  de  su  propio  coche ,  por- 
que no  pensasen  allá  que  le  habian  muerto. 

Hizole  salir  del  coche  antes  de  llegar  al  castillo,  y  San- 
cho de  Avila  salió  á  rescibir  al  marqués ,  y  afirma  él  y  los 
demás  oficiales  que  jamás  entendieron  que  venia  el  electo 
con  él,  y  el  clérigo  se  descuidó  de  decillo,  y  le  hicieron  que- 
dar en  el  cuerpo  de  guardia ,  y  estando  el  marqués  y  Sancho 
de  Avila  tractando  sobre  lo  que  habia  de  hablar  á  los  solda- 
dos, enviaron  por  el  dicho  electo,  y  les  dijeron  que  ya  le  ha- 
bian dado  de  puñaladas  y  echado  en  el  foso ,  como  en  efecto 
fué  así  que  lo  hizo  el  mismo  alférez  que  habia  hecho  lo  del 
sargento  mayor,  y  aunque  entrambos  á  dos  merecían  bien 
la  muerte,  ha  sido  en  tiempo  y  coyuntura  que  ha  hecho  gran 
daño  á  la  alteración  destotros ,  y  el  marqués  ha  mostrado 
tanto  sentimiento  de  haber  muerto  al  electo  llevándolo  deba- 
jo de  su  palabra  que  no  quiere  persuadirse,  que  no  se  sabia 
que  fué  desgracia ,  y  así  no  quiere  traclar  mas  con  los  sol- 
dados, y  hace  otras  demostraciones  que  no  son  provechosas 


492 

para  este  tiempo ,  y  yo  podría  hacer  las  mismas,  pues  tam- 
bién le  había  asegurado ;  pero  la  averiguación  desto  ha  de 
quedar  para  otra  coyuntura,  sí  bien  tengo  por  cierto  que 
naide  entendió  de  la  manera  que  el  electo  volvía ,  sino  que 
fué  desgracia  causada  por  sus  pecados  ó  por  la  de  todos. 

Este  molin  de  los  del  caslillo  ha  sido  la  mayor  maldad 
del  mundo ,  y  que  ha  mostrado  bien  claro  el  estar  concer- 
tados estotros  con  ellos  muy  de  atrás  de  que  los  dejarían 
entrar  en  la  villa  como  lo  hicieron ,  y  así  como  cuando  se 
amotina  un  regimiento  de  alemanes  ó  de  otra  nación  lo  deja 
de  hacer  la  compañía  que  es  de  guardia,  paresce  que  hubie- 
ran de  seguir  esto  los  del  castillo ,  pues  se  puede  decir  que 
es  la  compaüia  de  guardia  de  todos  estos  estados,  y  lo  que 
han  hecho  viene  á  ser  por  donde  mas  daño  ha  entrado  en 
ellos. 

Yo  me  hallé  muy  confuso  este  día  en  lo  que  había  de  ha- 
cer para  asegurar  el  castillo,  porque  en  el  meter  en  ti  tudes- 
cos ó  otra  nación,  como  me  lo  persuadían  algunos,  había 
tres  inconvenientes  muy  grandes,  primeramente  la  afrenta 
que  se  hacia  y  mal  nombre  que  se  ponía  á  toda  nuestra  na- 
ción, aunque  los  que  delta  se  han  amotinado  lo  tienen  bien 
merescido;  y  el  segundo  la  dubda  que  se  podía  tener  que 
no  los  dejarían  entrar  y  se  alterarían  de  nuevo;  y  el  tercero 
que  los  amotinados  que  están  en  la  villa  no  hiciesen  con 
estotro  mayor  desorden  de  saquearla  y  apoderarse  del  cas- 
tillo temiendo  que  no  se  les  metiese  por  alli  golpe  de  gen- 
te de  otras  naciones  para  echarlos  de  aquí,  como  andaba  ya 
la  voz  entre  ellos ,  y  asi  tomé  resolución  de  disimular  por 
agora,  pues  estaban  ya  quietos  los  del  dicho  castillo,  don- 
de fui  otro  día  habiendo  sacado  primero  del  cien  soldados 
de  una  compañía  á  instancia  de  Sancho  de  Avila ,  con  lo 
cual  y  con  la  muerte  de  aquellos  dos  dice  que  eslá  asegu- 


495 

rado  de  los  que  quedan;  pero  cierto  yo  no  lo  atfoi/  en  mi. 
pecho,  y  si  Dios  fuere  servido  que  se  acabe  estotro  será 
necesario  hacer  una  gran  mudanza  de  gente  en  aquella  pla- 
za, que  es  harta  lástima  que  se  haya  venido  con  ella  á  cier- 
tos términos. 

Pasados  dos  dias  desta  desorden  del  castillo,  parescien- 
do  que  estotros  amotinados  estaban  algo  quietos,   porque 
aunque  algunos  se  hablan  alterado  de  la  muerte  de  aquellos 
dos ,  á  los  mas  les  había  parescido  mal  amotinarse  los  del 
castillo,  me  resolví  de  proponer  á  toda  esta  gente  lo  que  V.  M. 
verá  por  el  papel  que  aquí  va  impreso ,  y  parescióme  que 
hablalles  sobre  ello  á  todos  juntos  como  lo  había  hecho  has- 
la  aquí  seria  de  poco  fruclo,  porque  no  me  podían  oír  sino 
cincuenta  ó  ciento  de  los  que  estuviesen  mas  cerca ,  y  los  de- 
[  más  como  no  lo  entienden  luego  sale  la  voz  del  nó  entre 
ellos,  y  no  hay  remedio  después  de  hacellos  capaces,  ni  quie- 
ren oir ,  y  así  envié  á  decir  al  electo  y  á  los  de  su  consejo, 
que  me  enviasen  dos  soldados  de  cada  compañía  los  mas 
puestos  en  razón ,  de  quien  confiasen ,  que  sabrían  referir  lo 
que  se  les  dijese  á  los  otros,  porque  yo  quería  proponelles 
algunas  cosas  que  estarían  muy  bien  á  todos ;  y  así  rae  en- 
viaron luego  hasta  cien  personas ,  á  los  cuales  ya  dije  de 
palabra  no  solo  lo  que  se  contiene  en  el  papel ,  pero  otras 
muchas  cosas  al  mismo  propósito  que  me  paresció  que  pu- 
dieran movelles,  y  les  encargué  que  lo  tratasen  con  sus  com- 
pañías y  que  me  respondiesen  quietamente,  y  para  esto  les 
di  sendas  copias ,  y  al  mismo  tiempo  envié  al  electo  y  á  los 
del  su  consejo  otras  tantas,  y  había  dado  algunas  al  mar- 
qués Chapín  y  á  Sancho  de  Avila ,  y  Hierónimo  de  Roda,  pa- 
ra que  cada  uno  lojractase  con  soldados  particulares  conos- 
cidos,  porque  persuadiesen  á  los  demás,  y  todos  aquellos 
con  quien  yo  hablé  ofrescieron  de  hacer  muy  buen  oficio,  y 


494 

paresció  que  no  solo  iban  persuadidos,  pero  aun  muy  tier- 
nos; pero  dentro  de  un  cuarto  de  hora  que  estaba  ya  el  lu- 
gar lleno  de  corrillos  leyendo  los  papeles ,  y  oyendo  lo  que 
les  decian,  comenzaron  á  rompellos  y  á  alborotarse  con  ma- 
yor furia  que  nunca ,  como  si  les  pidiera  la  mayor  sinrazón 
del  mundo ,  y  tocaron  arma  y  tomaron  sus  armas ,  y  inquie- 
tando por  todas  partes  la  tierra  se  juntaron  todos  en  la  pla- 
za de  la  villa,  donde  su  electo  les  hizo  un  muy  gran  parla- 
mento dende  la  casa  donde  está ,  persuadiéndoles  cuanto  yo 
les  pedia ,  y  diciendoles  entre  otras  cosas  que  si  no  tomaban 
brevemente  resolución ,  que  él  temia  que  iríamos  á  buscar 
los  enemigos  de  V.  M.  con  otras  naciones,  y  que  quedarla 
la  nuestra  con  gran  ignominia  y  vergüenza  destruyendo  su 
^  tierra:  le  tiraron  de  arcabuzazos ,  y  se  hubo  de  retirar  con 
harta  priesa ,  y  anduvieron  todo  aquel  dia  y  noche  tocando 
arma  y  tirando  arcabuzazos  por  toda  la  tierra,  quebrando 
puertas  y  ventanas  y  haciendo  otros  mil  desórdenes,  y  pa- 
saron muchas  veces  por  delante  de  mi  posada,  diciendo  mu- 
chas desvergüenzas  y  entre  otras  que  me  sacasen  de  la  vi- 
lla; pero  en  lo  que  mas  grita  anduvo  es  que  malasen  al 
maestro  de  campo  Valdés,  que  acaso  acertó  á  venir  aqui  aquel 
dia,  habiéndole  yo  enviado  á  llamar  para  dar  orden  en  algu- 
nas cosas  de  Holanda ,  y  fué  necesario  que  se  escondiese  de 
la  furia  destos,  y  le  despaché  luego ;  y  paró  lo  de  aquel  dia 
en  estar  toda  la  noche  y  toda  la  gente  en  la  plaza  de  la  villa, 
donde  hicieron  nuevo  electo  y  consejeros ,  dando  muchos  pa- 
los al  que  hasta  allí  hablan  tenido,  el  cual  era  hombre  de 
buena  intención  y  de  no  mala  razón ,  y  habia  aceptado  por 
fuerza  el  cargo ,  y  siempre  deseado  y  procurado  aquielallos 
y  hecho  en  esto  los  oficios  que  yo  le  enviaba  á  mandar,  que 
ha  sido  la  causa  de  quitalle,  y  el  que  han  elegido  me  dicen 
que  es  el  mayor  bellaco  desvergonzado  que  hay  en  la  infan- 


lería ,  y  que  él  deseó  mucho  verse  electo ,  y  así  les  ofreció 
aquella  noche,  que  fué  á  11  deste,  de  hacelles  pagar  denlro 
de  ocho  dias  todas  las  pagas ,  servicios  y  testamentos  y  qyan- 
to  mas  pretenden,  y  si  no  dejalles  saquear  la  tierra,  -^f^f  7f>f^ 

Tienen  estos  por  sargento  mayor  un  fulano  de  Alderete, 
natural  de  Alcalá,  que  para  su  tiempo  es  bien  que  se  sepa, 
que  debe  de  ser  el  mas  mal  hombre  que  hoy  hay  en  la  tierra, 
que  es  el  que  ha  causado  este  daño  y  impide  los  remedios, 
y  yo  estuve  harto  tentado  de  hacerle  malar,  y  ha  parescido 
después  que  tomarán  los  amotinados  ocasión  desto  para 
acabarse  de  perder  del  todo,  y  tomé  otro  camino  pensándole 
ganar  por  medio  de  tin  hermano  suyo  que  debe  de  ser  de 
mejor  intención  que  él,  y  vine  á  ofrecerle,  lo  que  V.  M. 
verá  por  la  copia  de  la  cédula  que  con  esta  va,  y  no  ha  ha- 
bido con  él  remedio  sino  que  me  la  ha  vuelto  diciendo  el 
hermano  del  muchos  mas  males  de  los  que  yo  puedo  decir, 
y  asi  sospecho  que  este  debe  tener  muy  mas  dañada  inten- 
ción que  de  pedir  sus  pagas,  y  plegué  á  Dios  que  no  haya, 
muchos  de  la  misma.  vv^ 

El  dia  siguiente  fué  este  sargento  con  grand  golpe  de 
soldados  á  la  iglesa  mayor ,  y  pidió  que  le  enviasen  luego 
un  clérigo  con  paramentos  y  todo  recaudo  para  decir  una 
misa  en  la  plaza ,  y  diciéndole  el  vicario  general  que  vinie- 
sen á  villa  á  la  iglesia ,  porque  por  el  concilio  no  se  podia 
decir  en  otra  parte ,  entró  por  fuerza  en  la  sacristía  y  tomó 
todo  el  recaudo  para  decir  misa,  y  hizo  poner  el  altar  en  la 
plaza ,  y  un  clérigo  español  destas  compañías ,  que  debe  de 
ser  menos  escrupuloso  se  la  dijo,  y  todos  los  amotinados  la 
oyeron  y  hicieron  juramento  á  su  electo,  y  de  no  salir  nin- 
guno de  la  villa  aunque  le  pagasen ,  hasta  que  estuviesen  pa- 
gados todos  y  otras  cosas  bien  fuera  de  propósito,  y  dellas  ha- 
bían echado  y  echaron  después  bandos  so  pena  de  la  vida ,  y 


496 

cada  (lia  los  echan  de  mil  disparates,  y  cuando  se  les  anioja 
dicen  que  son  en  mi  nombre. 

''^'  Después  desto  salen  cada  noche  muchos  carteles  fijados 
por  las  paredes ,  sin  que  se  sepa  quien  los  pone ;  unos  per- 
suadiendo á  los  demás  que  hagan  lo  que  yo  les  he  pedido,  y 
los  mas  contradiciéndolo  con  extrañísimas  invenciones  y  des- 
vergüenzas ,  y  la  difidencia  que  anda   enlre  ellos  temiendo 
que  algunos  se  quieren  reducir  los  hace  andar  mas  altera- 
dos ,  prosiguiendo  sus  armas  y  alborotos  de  dia  y  de  noche, 
y  traen  la  tierra  alterada  y  afligida ,  y  han  sido  causa  que 
malparan  una  infinidad  de  mugeres ,  y  aun  han  muerto  de- 
sastradamente algunos  hombres ,  y  se  huyen  de  la  tierra  con 
sus  haciendas  y  aun  sin  ellas  cuantos  pueden ,  así  mercade- 
res como  burgeses ,  como  lo  verá  V.  M.  por  dos  peticiones 
que  este  electo  y  los  de  su  consejo  me  enviaron ,  y  es  muy 
bueno  decir  en  ellas ,  que  yo  habia  dado  órdenes  ,  porque  las 
que  alli  refieren  son  las  que  ellos  por  sus  bandos  han  dado, 
y  en  ninguna  cusa  la  hay  ya  en  la  villa,  'porque  demás  de 
haber  echado  al  gobernador  se  han  ido  los  del  consejo,  y 
no  hay  quien  administre  justicia ,  que  estos  lo  tienejí  todo 
tiranizado,  y  se  acabaron  ya  de  apoderar  de  todas  las  puer- 
tas, y  creo  que  ha  de  venir  á  faltar  la  viclualla,  no  osando 
nadie  traerla  por  los  desórdenes  destos. 


FÍN  DEL  TOMO  TRKINTA. 


índice 


de  lo  contenido  en  los  treinta  tonio«  qne  van 
publicados. 


Páginas. 
Acuña  ( D.  Antonio)  obispo  de  Zamora. 

Su  prisión,  tomo  1.** 360 

Su  muerte  en  garrote ,  tomo  1.° o6o 

Ad\'ertencia ,  tomo  21 

Advertencias  que  el  duque  de  Medinaceli  (D.  Juan  de 
la  Cerda)  dejó  á  D.  García  de  Toledo  sobre  el  gobierno 
del  reino  de  Sicilia,  tomo  28,  desde  la  pág.  o04  hasta  la    odi 

Afán  de  Ribera  (D.  Fernando),  duque  de  Alcalá,  to- 
mo 2o 438 

Afán  de  Ribera  (D.  Pedro),  duque  de  Alcalá,  tomo  2o.     464 

Agustín  (D.  Antonio)  arzobispo  de  Tarragona.  — Noti- 
cia de  un  poema  latino  que  compuso  en  alabanza  de  Feli- 
pe II  por  la  victoria  de  Lepanto,  que  existe  manuscrito 
en  la  Biblioteca  del  Escorial ,  tomo  o.° 270 

Altona  (marqués  de)— Y.  Austria  (D.  Juan  de)— Docu- 
mentos sobre  hechos  militares  de  D.  Juan  de  Austria,  hijo 


2 

Páginas. 


de  Felipe  IV,  y  su  correspondencia  con  el  marqués  de  Ai- 
tona  ,  tomo  13 407 

Alba  (duque  de) — Carta  á  D.  Juan  de  Austria  dándole  al- 
gunos consejos  en  los  negocios  de  la  guerra.  Bruselas  o 
de  mayo  de  1571,  tomo  3." 273 

—  Id.  al  secretario  Eraso ,  en  que  le  dice  que  ha  recibido 
la  patente  de  general  del  ejército  de  Flándes  y  otros  des- 
pachos ,  de  que  se  muestra  poco  satisfecho.  Cartagena  26 

de  abril  de  1567,  tomo  4.» 349 

—  Id.  á  Felipe  II  sobre  el  embarque  de  las  tropas  en  las 
galeras  de  Juan  Andrea  Doria ,  y  la  prisa  que  se  daba 
en  su  viaje  á  Flándes  sin  esperar  el  socorro  de  cien  mil 
ducados  que  se  le  hablan  de  remitir  de  Sevilla.  Cartage- 
na 26  de  abril  de  1567,  tomo  4," 551 

—  Id.  á  Felipe  II  haciendo  observaciones  sobre  la  ins- 
trucción que  se  le  habia  dado  al  encargarle  el  mando  del 
ejército  de  los  Paises  Bajos.  Cartagena  27  de  abril 

de  1567,  tomo  4." 354 

—  Id.  á  Felipe  II  diciendo  que  estando  á  punto  de  em- 
barcarse habia  recibido  los  cien  mil  ducados  de  Sevilla. 
Cartagena  27  de  abril  de  1567,  tomo  4.° 357 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  da  parte  de  su  navegación  y 
de  otros  pormenores  relativos  á  los  suizos  y  á  Flándes. 
Cabo  de  Creus  6  de  mayo  de  1567 ,  tomo  4.° 360 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  dice  lo  que  puede  contestarse 
á  varios  puntos  contenidos  en  cartas  enviadas  á  S.  M. 
por  la  duquesa  de  Parma  y  otros  personajes.  Genova  24 

de  mayo  de  1567 ,  tomo  4.° 362 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  da  noticia  á  S.  M.  de  la  dolen- 
cia que  habia  sufrido ,  de  su  entrevista  con  el  duque  de 
Saboya ,  distribución  del  ejército ,  convenio  para  levan- 
tar seis  mil  suizos ,  y  temores  de  que  los  franceses  trata- 
sen de  impedir  el  paso  del  ejército.  San  Juan  de  Moria- 

na  28  de  junio  de  1567,  tomo  4.° 567 

—  Id.  á  Felipe  II  sobre  los  motivos  porque  habia  sacado 


Páginas. 

de  Lorena  á  D.  Antonio  de  Mendoza :  disimulación  con 
el  duque  de  Saboya  sobre  la  paga  de  cinco  mil  infantes, 
y  tratado  de  Genova.  Luxeraburgo  8  de  agosto  de  lo67, 

tomo  4." 379 

— Carta  á  Felipe  II  en  que  hace  relación  de  una  conferencia 
que  habia  tenido  con  la  duquesa  de  Parma ,  gobernadora 
de  Flándes.  Bruselas  8  de  setiembre  de  1567 ,  tomo  4.°.     412 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  da  cuenta  de  la  prisión  de  los 
condes  de  Egmont  y  de  Horn,  y  de  otras  personas.  Bru- 
selas 9  de  setiembre  de  lo67,  tomo  4.°  410 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  dice  habia  suspendido  apoderar-       q 
se  del  castillo  de  Gante ,  y  habla  del  lugar  seguro  en  que 
pensaba  tener  á  los  condes  de  Egmont  y  de  Ilorn.  Bru- 
selas 10  de  setiembre  de  1567,  tomo  4.° 423 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  volviendo  á  hablar  de  la  prisión 
de  los  condes  de  Egmont  y  de  Horn ,  añade  que  á  pesar 
de  haber  suspendido  la  toma  del  castillo  de  Gante,  de 
nuevo  habia  resuelto  apoderarse  de  él.  Bruselas  43  de 
setiembre  de  4o67,  tomo  4.° 423 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  trata  de  las  quejas  del  conde  de 
Mansfelt  y  satisfacción  que  dio  á  ellas,  con  observacio- 
nes sobre  los  estatutos  de  la  orden  del  Toisón ,  etc.  Bru- 
selas 18  de  setiembre  de  lo67,  tomo  4.** 444 

—  Id.  á  Felipe  II  sobre  las  excepciones  que  ponian  los 
presos  en  calidad  de  caballeros  del  Toisón,  y  de  lo  que 
se  podia  contestar  á  ellas.  Bruselas  2  de  octubre  de  lo67, 
tomo  4.» 448 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  da  cuenta  de  haber  escrito  so- 
bre las  prisiones  hechas  al  emperador  y  á  otros  príncipes 
de  Alemania :  de  la  fuga  de  muchos  flamencos  por  el  mie- 
do general  esparcido  en  el  pais :  de  la  traslación  de  los 
condes  de  Egmont  y  de  Horn  al  castillo  de  Gante ,  etc. 
Bruselas  2  de  octubre  de  lo67,  tomo  4.** 4ol 

—  Id.  á  Felipe  II  sobre  el  estado  de  las  cosas  de  Francia  y 
promesas  de  socorrer  al  rey  cristianísimo.  Bruselas  4  de 
octubre  de  lo67 ,  tomo  4.* 46o 


4 

Páginas. 


—  Carla  á  Felipe  II  sobre  la  capitulación  concedida  por  la 
duquesa  de  Parraa  a  los  de  Ainberes ,  edicto  para  que  na- 
die saliese  de  Flándes  con  sus  bienes,  encierro  de  los 
condes  de  Egmont  y  de  Horn  en  el  castillo  de  Gante  y 
examen  de  sus  papeles,  etc.  Bruselas  4  de  octubre  de 
1567,  tomo  4.° 466 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  propone  ir  á  socorrer  al  rey  de 
Francia  con  tropas  del  ejército  de  Flándes ,  avisa  el  se- 
cuestro de  los  bienes  del  príncipe  de  Orange,  y  dice  que 
enviará  copia  de  lo  que  resulta  contra  los  procesados, 
para  que  en  su  vista  mande  S.  M.  juntar  los  caballeros 
del  Toisón,  y  privando  de  sus  collares  á  los  presos,  pue- 
da hacerse  justicia  mas  desembarazadamente,  etc.  Bru- 
selas 10  de  octubre  de  1567 ,  tomo  4.° 470 

—  Id.  á  Felipe  II  en  que  habla  de  los  castigos  hechos  y 
por  hacer  en  Flándes.  Bruselas  13  de  abril  de  1568,  to- 
mo 4.° 487 

—  Id.  á  Felipe  II  sobre  el  sistema  que  se  proponia  se- 
guir en  el  gobierno  general  de  Flándes.  Bruselas  9  de 
junio  de  1568,  tomo  4.° 497 

—  Id.  á  Felipe  il  sobre  la  victoria  conseguida  contra  el 
príncipe  de  Orange,  y  necesidad  de  que  se  le  enviase 
dinero  para  licenciar  parte  de  las  tropas.  Chateau-Cam- 
bresis  23  de  noviembre  de  1568,  tomo  4." 506 

—  Id.  á  Felipe  II  sobre  la  conquista  de  Inglaterra  movida 

por  el  Papa.  Bruselas  11  de  diciembre  de  1569,  tomo  4.°    519 

—  Id.  á  Felipe  II,  sobre  la  autoridad  y  derechos  que  S.  M- 
como  conde  de  Borgoña  tiene  sobre  Besanzon ,  Bruselas 

24  de  diciembre  de  1571 ,  tomo  14 434 

—  Id.  á  D.  Juan  de  Zúñiga,  embajador  en  Roma,  sobre 
lo  que  debería  hacerse  para  sacar  fruto  de  la  victoria  de 
Lcpanto.  Bruselas  17  de  noviembre  de  1571,  tomo  3.°    292 

—  Id.  al  mismo  sobre  la  conquista  de  Inglaterra  que  ha- 
bía propuesto  el  Papa.  Bruselas  4  de  diciembre  de  1569, 
tomo  4." 516 

—  Parabién  que  dio  á  Felipe  II  por  la  victoria  de  Lepanlo 


o 

Páginas. 

(sin  fecha)  tomo  3." 283 

—  Parabién  á  D.  Juan  de  Austria  sobre  el  mismo  asunto. 
Bruselas  27  de  noviembre  délo' 1,  lomo  o." 286 

—  Llegada  del  duque  de  Alba  á  Bruselas  y  su  visita  á  la  ^ 
duquesa  de  Parma,  gobernadora  de  Flándes,  lomo  4."  .  388 

—  Su  patente  de  capitán  general  de  los  Paises  Bajos,  lo- 
mo 4." 388 

—  Su  plática  con  la  duquesa  de  Parma  en  26  de  agosto  ' 
de  lo67,  lomo4.° iOt' 

—  Lo  que  pasó  en  el  Consejo  que  el  duque  de  Alba  tuvo  -'• 
á  17  de  diciembre  (lo67),  y  asimismo  la  plática  que  tuvo 

con  Madama  (la  gobernadora  de  Flándes)  el  mismo  dia, 
lomo  4.° 481 

—  Requisitoria  que  expidió,  siendo  gobernador  y  capitán 
general  de  los  Estados  de  Flándes,  contra  el  barón  de 
Montigny,  tomo  o.° 5    ^ 

—  Y.  Felipe  II. 

—  V.  Mendivil  (Miguel  de). 

—  Y.  Montigny  (documentos  relativos  á  la  prisión  y  muerte 

de),  desde  la  página  526  hasta  la 566 

—  V.PíoY,  tomo\° 514 

—  Y.  Toledo  (D.  Fadrique  de) ,  hijo  del  duque  de  Alba. — 
Causas  que  dieron  motivo  á  su  prisión  y  á  la  de  su  pa- 
dre, tomo  7." 464 

—  Y.  Documentos  (nuevos)  sobre  las  causas  que  dieron 
motivo  á  la  prisión  de  D.  Fadrique,  hijo  del  duque  de  Al- 
ba, y  también  á  la  del  mismo  duque,  tomo  8.°  ....     483 

Albornoz  (Juan  de). — Carta  á  Gabriel  de  Zayas,  secre- 
tario de  S.  M.,  en  que  le  da  noticia  de  la  traslación  de 
los  condes  de  Egmont  y  de  Ilorn  al  castillo  de  Gante ,  y 
de  otras  cosas  relativas  á  la  situación  de  Flándes.  Bru- 
selas o  de  octubre  de  1567 ,  tomo  4.° 460 

Alcalá  de  llenares  (ayuntamiento  de). — Copia  sim- 
ple de  la  escritura  otorgada  por  el  ayuntamiento  de  Al-     -''*A 
cala  de  Henares  á  15  de  febrero  de  1513  por  ante  Alfon-     nol 


6 

Páginas. 

so  González,  escribano  y  notario  público  de  la  misma, 
creándose  por  ella  un  pósito  de  diez  mil  fanegas  de  trigo, 
fundado  por  cl  limo,  señor  cardenal  fray  Francisco  X¡- 
menez  de  Cisneros,  etc.,  tomo  14 396 

Alniag'po  (Diego  de).  — V.  Pizarro  (Francisco) ,  tomo  5.°    495 

—  V.  Relación  de  varios  sucesos  del  tiempo  de  los  Pizar- 

ros,  Alma gros,  la  Gasea  y  otros,  tomo  26 195 

—  V.  Información  hecha  en  ¡Panamá  á  44  de  diciembre  de 
1526  por  mandado  del  gobernador  de  Castilla  del  Oro, 
Pedro  de  los  Rios,  á  pedimento  del  capitán  Diego  de  Al- 
magro para  informar  á  S.  M.  de  los  servicios  del  capitán 
Francisco  Pizarro  yjsuyos,  y  pedir  mercedes,  tomo  26.    256 

—  V.  Otra,  {informaciotí)  sobre  el  mismo  asunto  hecha  en 
la  misma  ciudad  de  Panamá  á  15  de  abril  de  1551  á  pe- 
dimento de  Francisco  Pizarro,  tomo  26 265 

Almanzopa  (Villas  y  lugares  del  rio  de).  —  V.  Capitu- 
laciones entre  los  Reyes  Católicos  y  los  moros  de  Pur- 
chena,  y  villas  y  lugares  del  rio  de  Almanzora,  valle  de 
Purchena  y  Sierra  de  Filabres,  tomo  8.° 405 

Almería.  —  Capítulos  que  se  asentaron  con  la  ciudad  de 
Almería,  y  con  las  otras  ciudades,  villas  y  lugares  del 
reino  de  Granada  que  se  entregaron  á  los  Reyes  Católi- 
cos en  1490,  tomo  11 475 

— V.  Baza.  Asiento  y  promesa  al  caudillo  de  Baza  y  Alme- 
ría Yahía  Alnayar  en  tiempo  de  los  Reyes  Católicos, 
lomo  8.".   .   / 407 

Alonso  V. — Varias  noticias  sobre  la  segunda  expedición 
á  Ñapóles  por  el  rey  D.  Alonso  V  en  1452,  tomo  15.   .     477 

Alvarcz  (D.  Antonio),  marqués  de  Astorga,  tomo  25.  .     o56 

Alvarcz  de  Toledo  (D.  Antonio),  duque  de  Alba, 
tomo  25. 41' 


7 

Púfjinoü. 


Al%-arez  de  Toledo  (D.  Fernando) ,  duque  de  Alba, 
tomo  2o ií8 

Aniéi*iea. — Privilegios  concedidos  por  Carlos  V  á  los 

labradores  que  de  España  pasasen  á —  Y.  Carlos  V, 

lomo  2.° 204 

Apagón. — Coronación  y  consagración  de  reyes  y  cere- 
monias que  en  ella  se  guardan,  hecha  por  D.  Ramón 
Obispo. —Coronación  de  los  reyes  de  Aragón,  ele, 
tomo  14 oo6 

Aragpoii  (D.  Fernando  de),  duque  de  Calabria  y  virey  de  ;> 

Valencia. —  Carla  á  D.  Francisco  de  los  Cobos,  en  que  le  I 

habla  del  mal  estado  en  que  se  hallaba  aquel  reino ,  y  del  » 

remedio  que  esperaba  con  la  ida  del  nuevo  arzobispo  que  i  - 

se  habia  nombrado  en  la  persona  de  Sanio  Tomás  de  Vi-  i 

llanueva,  tomo  o.° 85 

—  Id.  á  Felipe  II  suplicándole  relevase  á  Santo  Tomás  de 
Villanueva  de  la  asistencia  al  Concilio  de  Trento  por  ser 
muy  interesante  que  no  se  ausentase  de  Valencia ,  to- 
mo o." 87 

—  Id.  al  mismo  sobre  desarmar  á  los  moriscos  de  Valen- 
cia ,  lomo  5." 88 

—  V.  Villanueva  (Santo  Tomás  de) ,  tomo  5.° 74 

Arag-oníD.  Juan  de),  conde  de  Ribagorza,  tomo  23.      42 

Aragón  (D.  Pedro  Antonio  de),  tomo  23 ooO 

Armada  invencible. — Diario  desde  22  de  julio  hasta 
7  de  agosto  de  ib88  de  los  sucesos  de  la  armada  (lla- 
mada la  invencible)  que  envió  Felipe  II  contra  Inglaterra, 
tomo  14 449 

Arnieuteros.— Carla  á  Felipe  II  en  que  le  da  cuenta 


Páginas. 

del  viaje  á  su  vuelta  á  Bruselas.  Bruselas  28  de  marzo 

de  1564,  tomo  4.° 302 

Arg^el  (Expedición  dcj  en  1541.— V.  Carlos  V. ,  tomo  1.°    234 

Artcaga  (Esteban  de y  López,  jesuíta). — Breve  no- 
ticia de  Gonzalo  Pérez  ,  tomo  13 531 

Audiencia  de  Santo  Domíng^o. — Instrucción  que 
dio  al  bachiller  Pedro  Moreno ,  su  fiscal ,  enviándole  al 
golfo  de  las  Higueras  con  despachos  de  S.  M.  para  Gil 
González  Dávila  y  Cristóbal  Dolid  sobre  las  competencias 
que  tenian  estos  capitanes  con  los  de  Hernán-Cortés  y 
Pedrarias  Dávila  acerca  de  los  límites  que  á  cada  uno  le 
correspondían  en  sus  respectivas  conquistas,  tomo  1  °.   .     oH 

—  Carta  escrita  al  rey  por  los  oidores  de  la  audiencia  de 
Santo  Domingo  en  30  de  agosto  de  1520 ,  dando  cuenta 
á  S.  M.  del  suceso  del  viaje  que  por  mandado  de  Diego 
Yelazquez  hizo  Páníilo  de  Narvaez  con  una  armada  com- 
puesta de  ÍQ  navios  y  GOO  españoles  desde  la  isla  Fer- 
nandina  á  la  de  Ulúa,  lomo  1.° 495 

Aug-usta  ó  An^sbur^o  (Dieta  de).  Relación  de  lo 

que  en  las  cosas  de  la  fó  se  hizo  en  la en  el  año  de 

4550 ,  lomo  2.° 259 

Austria  (D.  Juan  de).  Su  correspondencia  con  D.  García 
de  Toledo,  cuarto  marqués  de  Villafranca,  desde  el  año 
de  1571  hasta  el  de  1577  sobre  sucesos  de  la  armada  de 
la  liga,  que  fué  la  que  combatió  enLepanto,  y  otras  que 
sucesivamente  se  hicieron  en  los  mismos  años ,  tomo  5.° 
desde  la  pág.  5  hasta  la 184 

—  Su  parecer  sobre  desmantelar  la  fortaleza  de  Túnez, 
lomo  5.° 159 

—  Propuesta  que  hizo ,  con  los  decretos  puestos  á  conti- 
nuación ,  sobre  el  modo  como  podría  hacerse  el  repartí- 


Páginas. 

miento  de  la  presa  que  tocó  á  las  galeras  de  S.  M.  á  con- 
secuencia de  la  victoria  de  Lepanto  ,  tomo  3." 230 

—  Copia  de  un  capítulo  de  carta  que  escribió  al  comenda- 
dor mayor  de  Castilla  (D.  Luis  de  Requesens)  sobre  el 
viaje  de  las  galeras  á  España  para  el  trasporte  de  tres  mi! 

infantes,  tomo  3.° 67 

—  Id.  de  un  despacho  que  envió  á  Felipe  II ,  y  remitió  á 
D.  García  de  Toledo,  con  una  carta  dirigida  á  este  últi- 
mo. Mesina  11  de  noviembre  de  1571,  tomo  3.**.   ...       34 

— 'id.  de  otro  despacho  enviado  á  Felipe  II.  Mesina  25 
de  noviembre  de  lo71 41 

—  Carta  que  escribió  á  D.  Juan  de  Zúñiga,  y  remitió  S.  A.  ^ 
á  D.  García  de  Toledo,  sobre  las  desavenencias  suscita- 
das entre  Su  Santidad  y  el  duque  de  Florencia,  y  tardanza 

de  la  salida  á  la  mar  de  Marco  Antonio  Colona  con  las  ga- 
leras y  dificultades  que  por  esta  razón  se  le  ofrecían. 
Mesina  o  de  mayo  de  lo72,  tomo  3.° 85 

—  Id.  que  escribió  al  cardenal  Granvela  (sobre  operacio- 
nes de  la  armada).  Mesina  2  de  setiembre  lo73,  tomo  3."     126 

—  Id.  á  los  cristianos  de  la  isla  de  Rodas.  Mesina  IS  de 
enero  de  lo72,  tomo  3." 331  "^ 

—  Id.  á  los  cristianos  de  la  Morea  y  á  su  arzobispo.  Me- 

.  sina  9  de  junio  de  1574 ,  tomo  3." 353 

—  Relación  de  su  enfermedad  y  muerte  ,  tomo  7.°.  .   .    .     443 

—  Id.  sobre  el  mismo  asunto ,  pág.  247  y  siguientes  del 
tomo  7.** 

—  Id.  sobre  la  traslación  de  su  cuerpo  al  Escorial ,  págí-  — 
na  264  y  siguientes  del  tomo  7." 

—  V.  Alba  (duque  de) ,  tomo  3." 273 

—  V.  Doria  (Marcelo) ,  tomo  3." 119 

—  V.  Felipe  II,  tomo  o.",  desde  la  pág.  304  hasta  la.   .   .  311 

—  V.  Machuca  (Fr.  Juan),  tomo  3." 186 

—  V.  Toledo  (D.  García  de),  tomo  3.",  desde  la  página  5 
hasta  la 84 

—  V.  Zúñiga  (D.  Juan  de) ,  tomo  3.' 273 

—  V.  Servia  (P.  Fr.  Miguel)— Relación  de  los  sucesos  de  ía 


iO 

Páginas. 


armada  de  la  Sania  Liga ,  y  entre  oíros  el  de  la  balalla 
de  Lepante,  ele.  —  Donde  se  habla  de  aquel  príncipe, 
tomo  il 3ü9 

—  V.  Correspondencia  de  Felipe  2.°  y  de  otros  personajes 
con  D.  Juan  de  Austria,  desde  1568  hasta  1570,  sobre  la 
guerra  contra  los  moriscos  de  Granada,  tomo  28,  desde 

la  pág.  5  hasta  la 154 

—  V.  cartas  de  D.  Juan  de  Austria  y  otros  á  varias  perso- 
nas, escritas  desde  1570  hasta  1576.  tomo  28,  desde  la 
página  155  hasta  la 303 

Austria  (D.  Juan  de)  hijo  natural  de  Felipe  IV. — Docu- 
mentos sobre  hechos  militares  de  D.  Juan  de  Austria, 
hijo  natural  de  Felipe  IV,  y  su  correspondencia  con  el 
marqués  de  Aitoua ,  lomo  15 407 

—  V.  lomo  23 526 

Avellaneda  y  Haro  (D.  García  de),  conde  del  Castri- 
11o,  tomo  23 528 

Ayala  (D.  Pedro  López  de)  vida  literaria  del  canciller  ma- 
yor de  Castilla  D....  Por  D.  Rafael  de  Floranes,  tomo  19.        5 

Parte  primera.  —  Memorias  familiares,  militares  y  políticas 
del  canciller  D.  Pedro  López  de  Ayala. — Su  patria  la 
ilustre  provincia  de  Álava ,  tomo  19 13 

—  Id.  segunda.  — Sus  estudios  y  obras  literarias ,  lomo  19.     128 

—  Id.  tercera. — Serie  cronológica  de  los  elogios  que  á  la 
literatura  y  estudios  del  canciller  D.  Pedro  López  de  Aya- 
la  han  hecho  varios  autores,  tomo  19 454 

—  Id.  cuarta.  —  Defensa  por  la  veracidad  de  D.  Pedro  Ló- 
pez de  Ayala  en  la  Crónica  del  rey  D.  Pedro,  tomo  19.  .     513 

Ayllon  (El  Licenciado) — Parecer  que  dio  á  Diego  Vc- 
lazquez  sobre  la  armada  que  este  habia  aprestado  para 
enviar  contra  Hernán  Cortés,  tomo  1.° 476 

—  Dos  cartas  escritas  á  S.  M.  con  fecha  de  8  de  enero  v  4 


I 


11 

Páginas. 


de  marzo  de  loáO ,  dando  cuenta  de  la  comisión  que  le 
habia  dado  la  audiencia  de  la  isla  Espaüola  para  impedir 
un  rompimiento  entre  Diego  Velazquez  y  Bernan  Cor-         .*:» 
tés,  tomo  1." 481 

—  Y.  Audiencia  de  Santo  Domingo,  tomo  1.° 511 

Aznar  (Fr.  Andrés),  asistente  general  de  la  orden  de  San 
Agustín. — Carta  á  Felipe  IV  participándole  la  canoniza- 
ción de  Santo  Tomas  de  Yillanueva,  tomo  o.° 133 

Azpilcneta  (Dr.  D.  Martin  de) — Memorial  á  Felipe  II 
en  la  causa  de  D.  Fr.  Bartolomé  de  Carranza ,  arzobispo 
de  Toledo,  tomo  o." 495 

Baeza  (Gaspar  de).  —  Vida  de  el  famoso  caballero  don 
Hugo  de  Moneada ,  tomo  24 lo 

—  Facsímile  de  su  firma,  tomo  24 18 

Baranda  (D.  Pedro  Sainz  de). — Clave  de  la  España 

Sagrada,  tomo.  22,  desde  la  página  o  hasta  la.  .    .    .     507 
— Retrato  y  facsímile  de  su  firma,  tomo  22 .15 

—  V.  Cronicón  de  Yalladolid  ilustrado  con  notas  por  don 
Pedro  Sainz  de  Baranda ,  tomo  13 5 

— V.  Nota  biográfica  y  catálogo  de  sus  obras,  tomo  24.        7 

Barbaroja.—V.  Carlos  V,  tomo  1.° 212 

—  Y.  Ygarcia  (Andrés),  tomo  2." 381  *í 

Baza. — Asiento  y  promesa  al  caudillo  de  Baza  y  Almería 
Yahía  Alnayar  en  tiempo  de  los  Reyes  Católicos,  tomo  8.'    40T 

— V.  Reyes  Católicos.—  Carta  del  Rey  Católico  al  doctor 
Talavera  y  á  Fernand  Alvarez ,  sobre  proveimiento  de 
dinero  y  víveres  para  el  cerco  de  Baza,  tomo  11.    .   .     461 

Bcnavldes  (D.  Francisco  de),  conde  de  Sanlisleban, 
tomo  23 546 


12 

Paginas. 


Dernardlno  (Licenciado). — Su  sentencia,  tomo  1.".  .  296 

Biserta.  — Y.  Felipe  U,  tomo  3." i95 

Borja  (Gaspar  de),  cardenal — V.  tomo  23.    .....  398 

Bravo  (Juan). — Su  sentencia  y  decapitación,  tomo  1."  .  283 

Bravo  de  Bojas  (Lope). — V.  Floranes  (D.  Rafael). — 
Notas  manuscritas  por  la  mayor  parte  genealógicas,  que 
puso  á  las  márgenes  de  un  ejemplar  de  la  crónica  de  don 
Juan  II  de  la  edición  de  Logroño  de  4517 ,  en  fol.  Lope 
Bravo  de  Rojas,  sevillano,  en  lo5o.  Las  transcribe  de  su 
mano  y  las  ilustra  con  aumento  de  otras  y  la  vida  lite- 
raria del  autor  D.  Rafael  Floranes,  tomo  20 503i«ji 

Broeense.  Su  proceso  por  la  Inquisición  de  Yalladolid, 
tomo  2.° 5 

—  Facsímile  de  su  letra  y  firma,  tomo  2." 39 

—  Noticias  biográficas  de  Ídem ,  tomo  2.° 159 

—  Obras  compuestas  por  el  mismo,  de  que  hay  noticia  en 

su  proceso  y  testamento,  las  mas  sin  acabar,  tomo  2.°.     168 

Bnrg^os  (ayuntamiento  de). — V.  Murcia  (ciudad  de), 
tomo  2." 318 

Burricl  (P.  Andrés  Marcos)—  Correspondencia  que  tuvo 
con  varias  personas  sobre  la  comisión  que  le  dio  el  go- 
bierno de  examinar  los  archivos  de  Toledo,  junto  con 
otros  papeles  en  que  se  da  noticia  de  igual  examen  de 
diferentes  archivos  del  reino,  tomo  15 229 

—  Razón  de  su  vida,  dada  por  su  hermano  Antonio,  lo- 
mo 8." oG8 

Caboto  (Sebastian). —  Carta  á  Carlos  V  denunciando  el 
proyecto  que  tenian  los  franceses  de  acuerdo  con  el  du- 


13 

Páginas. 

que  de  Northuniberland  de  invadir  las  posesiones  espa- 
ñolas en  el  Perü.  Londres  15  de  noviembre  de  1554, 
tomo  5.° 512 

Cádiz  (D.  Rodrigo  Ponce  de  León),  marqués  de — Ins- 
trucción que  dio  á  Juan  de  Baeza  que  iba  de  su  parte  á 
los  Reyes  Calóiicos,  tomo  H 470 

Calabria  (duqnc  de). — V.  Aragón  (D.  Fernando  de), 

tomo  6° 

Calcena  (Juan  Ruiz  de). — V.  Ruiz  de  Calcena  (Juan), 
lomo  7." 572 

Cano  (Juan  Sebastian  del). — Carla  de  Carlos  V  á  Juan 
Sebastian  del  Cano,  su  fecha  en  Valladolid  á  15  de  se- 
tiembre de  1522,  para  que  fuese  á  darle  cuenta  de  su 
viaje,  tomo  1.° 247 

—  Merced  que  le  hizo  Carlos  V,  su  data  en  Valladolid  á  25 
de  enero  de  1525,  de  quinientos  ducados  de  oro  durante 

su  vida,  tomo  1.' 248 

—  Perdón  que  le  concedió  Carlos  V  en  Valladolid  á  15  de 
febrero  de  1525,  de  la  pena  en  que  habia  incurrido  por 
haber  vendido  una  nao  á  extranjeros,  tomo  I."  .    .    .    .     557 

—  Gracia  que  le  otorgó  Carlos  V  en  Burgos  á  20  de  mayo 
de  i524,  para  que  pudiese  traer  dos  hombre»  que  guar- 
dasen su  persona,  armados  de  todas  armas,  tomo  1."  .     249 

—  Orden  de  Carlos  V,  Madrid  15  de  abril  de  1525,  á  los 
oficiales  de  la  contratación  de  la  Especería  para  que  pa- 
gasen á  Juan  Sebastian  del  Cano  á  la  vuelta  de  su  se- 
gundo viaje  los  500  ducados  de  oro  de  que  S.  M.  le  ha- 
bia hecho  merced,  tomo  1." 251 

—  Memorial  de  Cano  á  Carlos  V  pidiendo  varias  merce- 
des, tomo  1.' 558 

—  Su  testamento,  tomo  i." 252 

—  Su  biografía,  tomo  1." 244 


14 

Páginas. 

—  Facsímile  de  su  firma,  tomo  1.°  .   .   , 270 

—  Extracto  del  proceso  que  intentó  ante  el  Consejo  doña 
Catalina  del  Puerto,  madre  de  Juan  Sebastian  del  Cano, 
para  que  se  le  pagasen  los  devengados  del  sueldo  y  de 
la  pensión  de  500  ducados  de  oro  concedidos  á  su  hijo, 

tomo  1." 340 

—  Noticia  del  paradero  de  la  nao  Victoria  en  que  Juan  Se- 
bastian del  Cano  dio  el  i°  la  vuelta  al  mundo,  tomo  4.°    ooo 

Capitulaciones  (varias)  entre  los  Reyes  Católicos  y 
el  último  rey  de  Granada,  tomo  8.°,  desde  la  página  411 
hasta  la 463 

—  Id.  entre  los  Reyes  Católicos  y  los  moros  de  Purchena, 
villas  Y  lugares  del  rio  de  Almanzora ,  valle  de  Purche- 

na  y  sierra  de  Filabres,  tomo  8° 403 

Capítulos  ordenados  por  los  diputados  de  Su  Santidad 
para  la  liga  general  con  España  y  Venecia  (ano  1570), 
tomo  3.° 337 

Carbajal. — V.  Galindez  (Dr.  D.  Lorenzo). — Anales  bre- 
ves del  reinado  de  los  Reyes  Católicos  Ü.  Fernando  y 
Doña  Isabel ,  que  dejó  manuscritos  el  Dr.  D.  Lorenzo  Ga- 
lindez Carbajal,  y  una  continuación  de  la  crónica  de  aque- 
llos reyes  que  hasta  ahora  no  se  ha  publicado,  tomo  18.    227 

—  Adiciones  genealógicas  á  los  Claros  Varones  de  Fernán 
Pérez  de  Guzman,  señor  de  Batres,  escritas  en  el  año 
de  1517 ,  después  del  mes  de  octubre ,  como  de  ellas 
consta,  tomo  18 423 

Cardenal  de  Osma. — V.  Loaisa  (fray  García  de), 
cardenal  de  Osma,  etc.,  tomo  14,  desde  la  página  5  has- 
la  la 284 

Cárdenas  (D.  Iñigo  de).— Cartas  á  Felipe  III,  siendo  su 
embajador  en  París,  sobre  la  guerra  que  queria  mover 


45 

Paulinas. 

Enrique  IV  de  Francia :  con  una  relación  de  la  muerte  y 
exequias  de  este  monarca,  tomo  o° -157 

Cardona  (D.  Raimondo) ,  conde  de  Albento,  tomo  25.  .      50 

Carlos  (el  príncipe  D.^  hijo  de  Felipe  II. — ^V.  Felipe  II, 

tomo  4.° 484 

—  Tres  documentos  sobre  su  prisión  y  muerte ,  tomo  15.  595 

—  Id.  en  el  tomo  26  desde  la  pág.  592  hasta  la 368 

—  Id.  en  el  tomo  27,  desde  la  pág  o  á  la 210 

—  Facsímile  de  su  firma ,  tomo  27,  pág.  127  y 185 

— Copia  del  testamento  cerrado  original  del  príncipe  don 

Carlos,  otorgado  ante  Domingo  Zavala ,  escribano  de  cá- 
mara del  Consejo  real  (Alcalá  19  de  mayo  de  1364),  to- 
mo 24 * 3io 

— Y.  Daza  Chacón  (Dionisio). — Relación  verdadera  de  la 
herida  de  cabeza  del  Serenísimo  príncipe  D.  Carlos  nues- 
tro señor,  de  gloriosa  memoria ,  la  cual  se  acabó  en  fin 
de  julio  del  año  lo62,  tomo  18 557 

— V.  Cédula  original  de  Felipe  II,  fecha  en  San  Lorenzo 
á  2  de  abril  de  1377 ,  para  que  Diego  de  Olarte  entregue 
al  prior  y  convento  de  Nuestra  Señora  de  Atocha  un  cru- 
cifijo de  oro  que  le  mandó  dar  de  limosma  el  príncipe 
D.  Carlos,  tomo  28 567 

Carlos  V. —  Carta  á  Hernán  Cortés  en  que  se  da  por 
satisfecho  de  sus  servicios.  Valladolid  en  13  de  octubre 
de  1322,  tomo  1.° 97 

—  Id.  avisándole  que  habia  mandado  tomarle  residencia. 
Toledo  á  4  de  noviembre  de  1323,  tomo  1.° 101 

—  Id.  a  D.  Juan  Martínez  Silíceo,  obispo  de  Cartagena, 
nombrándole  arzobispo  de  Toledo  (en  la  nota).  Gante  25 

de  octubre  de  1343,  tome-  !.• 131 

—  Id.  al  mismo  sobre  su  promoción  á  la  silla  primada ,  y 
sobre  auxilios  pecuniarios  para  la  expedición  contra  Ar- 
gel. Venelo  16  de  febrero  de  1346,  tomo  i.' 151 


10 

Páginas , 

—  Nombramiento  de  Hernán  Cortés ,  su  fecha  en  Barcelo- 
na á  6  de  julio  de  1529,  para  gobernador  y  capitán  ge- 
neral de  Nueva  España,  tomo  4." dOS 

—  Merced  á  favor  de  Hernán  Cortés,  su  fecha  en  Barcelo- 
na 20  de  julio  de  1529 ,  de  título  de  marqués  del  Valle, 
tomo  1." 10o 

—  Asiento  hecho  con  Hernán  Cortés  sobre  el  descubrimien- 
to y  conquista  de  las  islas  y  Tierra  Firme  del  mar  Océa- 
no ,  en  Madrid  á  27  de  octubre  de  1529 ,  tomo  i."  .   .     108 

—  Cédula  sobre  el  buen  tratamiento  de  los  indios ,  dada  en 
Granada  á  17  de  noviembre  de  1526,  tomo  1."  .    .    .    .     HO 

—  Instrucción  que  dio  Carlos  V,  en  1527,  áLope  Hurtado 
de  Mendoza,  nombrado  embajador  extraordinario  cerca 
del  rey  de  Portugal ,  para  que  solicitase  la  alianza  de 
este  reino  contra  la  Francia  é  Inglaterra  con  motivo  de 
querer  repudiar  Enrique  VIII  á  su  mujer  doña  Catalina, 

hija  de  los  Reyes  Católicos,  tomo  1." 128 

—  Informe  que  dio  á  Carlos  V  Lorenzo  Galindez  Carvajal, 
sobre  los  que  componian  el  Consejo  real. — V.  Galindez 
Carvajal  (Lorenzo),  tomo  1." 122 

Carias  escritas  ú  Carlos  V  por  el  Consejo,  Grandes  y  Pre- 
lados del  reino,  sobre  su  desafio  con  Francisco  1."  rey 
de  Francia, 

—  Carta  del  Consejo  de  12  de  junio  de  1528 ,  tomo  1."    .  49 

—  Id.  del  presidente  del  Consejo  de  12  de  junio  de  1528, 
tomo  1.» 50 

—  Id.  del  mismo  de  20  de  junio  de  1528,  tomo  1."  .   .   .  52 

—  Id.  del  mismo  de  20  de  junio  de  1528,  tomo  1."  .   .   .  53. 

—  Id.  del  arzobispo  de  Toledo  de  12  de  junio  de  1528, 
tomo  1." 58 

—  Id.  del  mismo  de  20  de  junio  de  1528,  tomo  1.*  .   .    .  60 

—  Id.  del  marqués  de  Villena  de  18  de  junio  de  1528, 
lomo  1." 65 

—  Id.  del  mismo  de  10  de  octubre  de  1528,  tomo  1.°.  .  .      66 


i7 

Páginas. 


—Carta  3el  duque  de  Nájera  de  19  de  junio  de  4528,  tora,  i  /      67 

—  Id.  del  duque  de  Alba  de  19  de  juaio  de  1528 ,  tomo  1."      69 

—  Id.  del  mismo,  de  14  de  octubre  de  1328,  tomo  í°..      7á 

—  Id.  del  marqués  de  Denia  de  19  de  junio  de  lo28j  to- 
mo 1.°.   ...................   .      74 

—  Id;  del  mismo  de  11  de  octubre  de  1528,  tomo  1.°  .   .      76 

—  Id.  del  duque  de  .^Iburquerque  de  20  de  junio  de  1528, 
tomo  1.° .i      77 

—  Id.  del  Condestable  de  Navarra  de  20  de  jumo  de  1328, 
tomo  1.°..   ..   ¿   ......... 79 

—  Id.  del  obispo  de  Avila  de  20  de  junio  de  1528,  tomo  1 ."      80 

—  Id.  de  la  ciudad  de  Santo  Domingo  de  la  Calzada  de  22 

de  junio  de  1528,  tomol.°. 82 

—  Id.  del  conde  de  Miranda  de  2o  de  junio  de  1528,  tomo  1 ."      8o 

—  Id.  de  Diego  García  de  Farades  de  24  de  junio  de  1528, 
tomo  1." 87 

—  Id.  de  D.  Pedro  Girón  de  25  de  junio  de  1328,  tomo  1."      88 

—  Id.  de  la  ciudad  de  Burgos  de  25  de  junio  de  1528, 
tomol.' 89 

—  Id.  de  la  ciudad  de  Murcia  de  25  de  junio  de  1528, 
tomol.° 90 

—  Id.  del  duque  del  Infantado  de  10  de  octubre  de  1528, 
lomo  1,° 92 

—  Id.  del  duque  de  Medinaceli  de  17  de  octubre  de  1528, 
tomo  1." 94 

Cmiquista  de  Túnez  y  la  Goleta  por  Carlos  V,  en  1533. 

—  Carta  de  Carlos  V  á  todas  las  ciudades  del  reino ,  su  fe- 
cha en  Barcelona  á  9  de  mayo  de  13o5,  noticiándoles  la 
jornada  de  Túnez  y  la  Goleta,  tonw)  1.°. 134 

—  Noticia  de  los  buques  aprestados  para  la  jornada  de 
Túnez  y  la  Goleta  (en  la  nota),  tomo  1." 135 

—  Alarde  que  hizo  Carlos  V  en  Barcelona  á  lo  de  mayo 
de  1555  de  las  tropas  destinadas  á  la  jornada  de  Túnez 
y  la  Goleta,  y  vistosos  trajes  de  los  grandes  que  le  acom- 


18 

Páginas. 


pañaban  (en  la  ñola),  tomo  1." io6 

—  Instrucción  que  dio  á  su  mujer  la  emperatriz  doña  Isa- 
bel al  encargarle  la  gobernación  de  estos  reinos  en  1555, 
antes  de  salir  á  la  expedición  de  Túnez,  verificada  en 
aquel  mismo  ano.  Barcelona  29  de  mayo  de  1555,  to- 
mo 5.° ". 558 

—  Carta  á  la  misma  emperatriz ,  fecha  en  Callar  á  12  de 
junio  de  1555,  dándole  cuenta  de  lo  que  habia  ocurrido 
desde  su  embarque  en  Barcelona  para  la  expedición  de 
Túnez  hasta  dicho  dia ,  tomo  5.° 554 

—  Belacion  de  lo  que  sucedió  en  la  jornada  de  Túnez  y  la 
Goleta,  tomo  1.» 159 

Tratos  de  Carlos  V  con  Bai^baroja  en  el  tiempo  transcur- 
rido desde  la  conquista  de  Túnez  en  1555 ,  hasta  la  des- 
graciada expedición  de  Argel  en  1541 . 

—  Carta  de  creencia  dada  por  Carlos  V  en  Gante  á  o  de 
marzo  de  1540  al  príncipe  Andrea  Doria  y  á  D.  Fernando 
Gonzaga,  para  que  pudiesen  tratar  con  Barbaroja  en 
nombre  de  S.  M.,  tomo  1.** 207 

—  Id.  que  escribió  Garlos  V  desde  Gante  en  5  de  marzo 
de  1540  á  Francisco  de  Tovar ,  alcaide  y  capitán  de  la 
Goleta ,  para  que  hiciese  cuanto  le  mandase  el  príncipe 
Andrea  Doria  y  D.  Fernando  Gonzaga,  tomo  1.".  .   .    .     210 

—  Id.  de  Carlos  V  á  Barbaroja,  su  fecha  en  Gante  á  5  de 
marzo  de  1540 ,  avisándole  que  habia  nombrado  al  prín- 
cipe Andrea  Doria  y  á  D.  Fernando  Gonzaga  para  que 
tratasen  con  él  en  su  real  nombre,  tomo  1." 212 

—  Salvoconducto  dado  en  Genova  á  10  de  abril  de  1540  por 
el  príncipe  Andrea  Doria  y  D.  Fernando  Gonzaga  á  las 
personas  que  cerca  de  ellos  enviase  Barbaroja,  tomo  1."    215 

—  Instrucción  dada  en  Genova  á  10  de  abril  de  1540  por 
el  príncipe  Andrea  Doria  y  D.  Fernando  Gonzaga  á  Juan 
Gallego,  contador  de  las  armadas  de  S.  M.,  sobre  lo  que 
habia  de  tratar  con  Barbaroja ,  tomo  1 .° 216 


19 

Páginas, 

Expedición  de  Argel  por  CMos  V  en  1544  é 

—  Carta  del  comendador  Bañuelos ,  su  fecha  en  Cartagena 
á  10  de  noviembre  de  4o41 ,  sobre  lo  ocurrido  en  la  ex- 
pedición de  Argel,  tomo  1.° .....     229 

—  Id.  de  Carlos  V,  de  3  de  no^^embre  de  1541 ,  al  carde- 
nal Tavera,  sobre  la  expedición  de  Argel,  tomo  1.'  .   .    234 

—  Copia  del  registro  de  carta  del  Príncipe  D.  Carlos  (5.°) 
á  la  Reina  de  Aragón  doña  Germana,  dándole  el  pésame 
por  la  muerte  de  su  marido  el  Rey  Católico ,  y  prome- 
tiéndole su  protección.  Bruselas  11  de  febrero  de  1516, 
tomo  14 355 

—  Extracto  de  una  cédula  enviada  á  la  villa  de  Madrid  des- 
de Bruselas,  con  fecha  14  de  febrero  de  lol6,  para  que 
mientras  venia  á  ocupar  el  trono  de  España ,  se  recono- 
ciesen por  gobernadores  del  reino  al  cardenal  de  Espa- 
ña y  al  Consejo  Real  tomo  2.' 205 

—  Copia  de  carta  del  Príncipe  D.  Carlos  (o.")  al  cardenal 
de  España  D.  fr.  Francisco  Ximenez  de  Cisneros,  sobre 
la  gobernación  destos  reinos ,  que  le  dejó  encargada  su 
abuelo,  y  él  se  la  confirma.  Bruselas  14  de  febrero 

de  1516,  tomo  14 358 

—  Id.  del  mismo  á  la  Reina  doña  Germana ,  consolándola 
en  su  aflicción  y  manifestándola  que  vendrá  pronto  á  vi- 
sitarla y  tomar  su  bendición.  Bruselas  lo  de  febrero  de 
1516,  tomo  14 357 

—  Copia  del  registro  de  carta  que  S.  M.  (Carlos  5.°)  envió 
desde  Bruselas  19  de  abril  de  1516,  al  cardenal  arzobispo 
de  Toledo  ( D.  fray  Francisco  Ximenez  de  Cisneros )  en 
contestación  á  otra  suya.  Habla  sobre  el  estado  de  la  go- 
bernación de  estos  reinos  y  otros  asuntos,  tomo  14.  .   .     360 

—  Id.  del  registro  de  carta  que  S.  M.  (Carlos  5.°)  escribió 
desde  Bruselas  15  de  julio  de  1516,  á  los  consejeros  del 


20 

Páginas. 

Consejo  de  Aragón ,  sobre  la  prosecución  de  la  causa 
pendiente  contra  el  vicecanciller  Micer  Antón  Agustín, 
tomo  44 363 

—  Registro  de  carta  del  Rey  D.  Carlos  (5.°)  al  cardenal  de 
España  D.  fr.  Francisco  Ximenez  de  Cisncros,  mandan- 
do que  la  causa  que  se  seguía  contra  Micer  Antón  Agus- 
tín se  remita  para  su  sustancíacion  al  Real  Consejo  de 
Aragón.  Bruselas  45  de  julio  de  1516,  tomo  14.  .    .   .     364 

—  Carta  que  escribió  al  ayuntamiento  de  Madrid  á  19  de 
setiembre  de  1517,  participándole  que  habia  llegado  fe- 
lizmente al  puerto  de  Villaviciosa,  tomo  2.° 306 

—  Juramento  que  le  tomaron  los  procuradores  á  Cortes,  en 

las  que  se  celebraron  en  Valladolid  año  de  lol8,  tomo  2.°    334 

—  Testimonio  de  una  cédula  del  emperador  Carlos  5.°,  des- 
pachada en  Zaragoza  á  16  de  diciembre  de  1518,  por  la 
(jue  hace  merced  al  barón  de  Montiñi  de  ciertos  marave- 
dises que  debían  los  tesoreros ,  receptores  y  otras  perso- 
nas de  la  cruzada,  etc.,  tomo  13 569 

—  Carta  que  escribió  al  ayuntamiento  de  Madrid ,  desde 
Londres  á  8  de  junio  de  1522 ,  haciéndole  saber  que  ha- 
bia llegado  bueno  á  Inglaterra ,  y  que  se  preparaba  á 
continuar  su  viaje,  tomo  2.° 317 

—  Escudo  de  armas  que  concedió  á  Hernán  Cortés  á  7  de 
marzo  de  1525,  tomo  2.° 196 

—  Carta  al  condestable  de  Castilla  D.  Iñigo  Fernandez  de 
Velasco,  escrita  desde  Burgos  á28  de  febrero  de  1528, 
previniéndole  que  se  apercibiese  para  la  guerra  contra 
Francia,  tomo  2.° 211 

—  Id.  al  conde  de  Haro,  desde  Monzón  á  15  de  junio  de 
1528,  dándole  cuenta  de  un  cartel  de  desafio  que  le  ha- 
bia enviado  el  rey  de  Francia ,  y  de  como  pensaba  con- 
testar según  mas  conviniese  á  su  honra  y  bien  de  sus 
reinos ,  tomo  2.° 212 

—  Id.  á  D.  Juan  de  Tovar,  su  fecha  en  Madrid  á  21  de 
setiembre  de  1528,  dándole  el  pésame  por  la  muerte 
de  su  padre  el  condestable  D.  Iñigo  Fernandez  de  Velas- 


21 

Páginas. 


co,tomo2.° 2i3 

—  Cédula,  fecha  en  Zaragoza  á  !.•  de  abril  de  1529,  man- 
dando pagar  á  Hernán  Cortés  el  gasto  que  habia  hecho  en 

el  apresto  de  la  armada  del  Maluco,  tomo  2." 415 

—  Id.  fecha  en  Madrid  á  o  de  noviembre  de  1329,  nom- 
brando á  Hernán  Cortés  por  gobernador  de  las  islas  y 
tierras  que  descubriese  en  el  mar  del  Sur,  tomo  2.".   .     401 

—  Id.  expedida  en  Avila  á  9  de  setiembre  de  lo31,  con- 
cediendo varios  privilegios  y  gracias  á  los  labradores 
que  desde  España  pasasen  á  América,  en  especial  á 
los  que  fuesen  á  la  isla  de  Santo  Domingo  ó  Española, 
tomo  2.» 204 

—  Cartas  que  se  escribieron  de  su  orden  á  varias  provin- 
cias con  motivo  de  impedir  al  francés  la  entrada  que  in- 
tentaba hacer  por  la  Navarra,  Perpiñan  y  Rosellon  en 

el  año  1342,  tomo  8." 529 

—  Carta  á  Francisco  de  los  Cobos ,  fecha  en  Metz  á  26  de 
junio  de  1344,  en  que  le  dice  las  provisiones  que  habia 
hecho  de  algunos  obispados  vacantes ,  nombrando  para 
la  silla  de  Valencia  á  Santo  Tomás  de  Villanueva,  to- 
mo 5.' 80 

—  Carta  sobre  los  últimos  momentos  de  su  vida,  27  de  se- 
tiembre de  1558,  tomo  6.' 667 

—  Forma  de  que  usó  cuando  hizo  cesión  de  los  Países  Ba- 
jos á  su  hijo  Felipe  2.°,  tomo  7.° 524 

—  V.  Cortés  (Hernán),  tomo  1.» 410 

—  V.  Cano  (Juan  Sebastian  del),  tomo  1." 247 

—  V.  Escuadra  española ,  tomo  2.° 592 

—  V.  María  (doña)  Reina  de  Inglaterra,  tomo  3.**.  .   .   .     557 

—  V.  Cobos  (D.  Francisco  de  los),  tomo  5.°,  página  74  y 
siguientes. 

—  V.  Maqueda  (duque  de),  virey  de  Valencia,  tomo  S."*   .     124 

—  V.  Villanueva  (Santo  Tomás  de) ,  tomo  5.° 74 

—  V.  Loaisa  (fray  García  de).— Su  correspondencia  con 
Carlos  5.*,  desde  la  página  o  del  tomo  14  hasta  la.  .   .    284 

—  V.  Fernando  5.»  (el  Rey  Católico).-"  Treslado  de  la 


Páginas. 

carta  que  escribió  el  Rey  de  Aragón  al  tiempo  de  su 
muerte  al  Príncipe."  (Fernando  el  Católico  á  Carlos  o."), 
tomo  14 353 

Carranza  (D.  Fr.  Bartolomé  de),  arzobispo  de  Toledo, 
Noticia  de  su  vida  y  del  proceso  que  le  formó  la  Intiui-r 

sicion,  tomo  5.°    ................  389 

—  Id.  documentos  relativos  al  mismo  asunto,  tomo  5.°   .  465 

—  V.  Morales  (Ambrosio  de),  tomo  5."  ........  463 

—  V.  Azpilcueta  (Dr.  D.  Martin  de),  tomo  5.°  ....   ,  495 

Carta  de  creencia  de  la  villa  de  la  Habana  al  obispo  de 
aquella  isla  para  el  emperador  Carlos  V,  tomo  26.  .   .    338 

Cartas  de  D.  Juan  de  Austria  y  otros  á  varias  personas, 
escritas  desde  1570  hasta  1576,  tomo  28  desde  la  pági- 
na 155  hasta  la.  . 305 

Carvajal.— V.  Galindcz  Carvajal  (l,orenzo) ,  tomo  1."  .     122 

Casas  (Fr.  D.  Bartolomé  de  las),  obispo  de  Chiapa. — 
Carta  autógrafa  dirigida  á  Carlos  Y ,  en  que  expone  que 
habia  venido  á  la  corte  para  informar  á  S.  M.  de  varias 
cosas  locantes  al  mejor  servicio  de  las  Indias ,  y  da  no- 
ticia de  lo  que  habia  hecho  hasta  entonces  para  la  pacifir 
cacion  de  varias  provincias  del  Nuevo-Mundo,  tomo  8.° .     555 

—  Libros  y  papeles  que  dejó  escritos,  y  que  se  hallaron  en 
el  colegio  de  San  Gregorio  de  Valladolid ,  tomo  8.° .  .   .     557 

— V.  Perú.  —  Copia  de  carta.....  donde  se  trata  el  verda- 
dero dominio  de  los  reyes  de  España  soJ)re  el  Perú,  etc., 
tomo  13 423 

Castro  (D.  Francisco  de),  tomo  23.   ........    285 

Catalina  (Doña),  hija  de  los  Reyes  Católicos.  —  Dote 
que  se  le  dio  en  su  primer  casamiento  con  Arturo,  prín- 


25 

Páginas. 

cipe  de  Gales ,  y  en  el  segundo  con  Enrique  VIII  de  In- 
glaterra, tomo  I.** 3o6 

—  Id.  sobre  su  divorcio.  —  V.  Instrucción  que  dio  Carlos  V 
á  Lope  Hurtado  de  Mendoza,  nombrado  embajador  extra- 
ordinario cerca  del  rey  de  Portugal,  etc. ,  tomo  1."  .   .     128 

Cerda  (D.  Juan  de  la).  — V.  Advertencias  que  el  duque 
de  Medinaceli  dejó  á  D.  García  de  Toledo  sobre  el  gobier- 
no del  reino  de  Sicilia ,  tomo  28 ,  desde  la  pág.  304  has- 
ta la ...     364 

Cerda  (D.  Luis  Francisco  de  la),  duque  de  Medinaceli, 
tomo  23 348 

Chalóos  (Filiberto) ,  tomo  23 86 

Cisneros.  (cardenal  Fr.  Francisco  Jiménez  de) — Carla 
que  le  escribió  Juan  Ruiz  de  Calcena  pocos  dias  después 
de  la  muerte  del  Rey  Católico.  V.  Ruiz  de  Calcena  (Juan) 
tomo  7.° 572 

—V.  Carlos  V.,  tomo  44,  págs.  338,360  y 364 

—  Y.  Alcalá  de  Henares  (apuntamiento  de). — Copia  sim- 
ple de  la  escritura  otorgada  por  el  ayuntamiento  de  Al- 
calá de  Henares  á  43  de  febrero  de  4313  por  ante  Alfonso 
González,  escribano  y  notario  público  de  la  misma,  creán- 
dose por  ella  un  pósito  de  diez  mil  fanegas  de  trigo,  fun- 
dado por  el  limo,  señor  cardenal  Fr.  Francisco  Jiménez 

de  Cisneros,  etc.,  tomo  44 396 

Clave  de  la  España  Sagrada  t 

—  Advertencia  preliminar ,  tomo  22 5 

—  Capítulo  primero. — Colaboradores  de  la  España  Sagra- 
da, tomo  22 11 

—  Retrato  del  P.  Florez  y  facsímile  de  su  firma ,  tomo  22  11 

—  Id.  de  D.  Pedro  Sainz  de  Baranda,  lomo  22.  ....  13 


24 

Páginas. 


—  Capítulo  S." — Breve  resena  del  contenido  de  cada  tomo. 
Tomo  22 i7 

—  Id.  3.° — Catálogo  de  las  sillas  antiguas  y  modernas  de 

la  iglesia  española,  tomo  22 59 

—  Id.  4.°  — Razón  de  los  documentos  contenidos  en  los 
apéndices  de  la  J5s;jrt/Ta  Sfláiraí/a,  tomo  22.  .....     425 

—  Id.  5.°-^ Calendario  español ,  tomo  22  ......   ,     262 

—  Id.  6.^ — índice  alfabético  de  todos  los  santos  compren- 
didos en  el  Caleridario  español ,  tomo  22  ......   ,     459 

Cobos  (Francisco  de  los).  Minuta  de  carta  á  Carlos  V 
en  que  le  habla  de  algunos  obispados  vacantes,  y  prin- 
cipalmente del  de  Valencia ,  y  sugetos  que  podrian  nom- 
brarse ,  tomo  5.° 74 

—  Carta  á  Carlos  V  en  que  le  dice  que  habían  parecido  muy 
bien  los  nombramientos  hechos  por  S.  M.  de  las  sillas 
vacantes  de  algunas  iglesias,  y  principalmente  de  la  de 
Valencia  en  la  persona  de  Santo  Tomás  de  Villanueva, 
lomo  5." .      86 

— I  V.  Loaisa  (Fr.  García  de).  Su  correspondencia  con  Car- 
los V  y  con  el  secretario  D.  Francisco  de  los  Cobos.  Tor 

mo  14,  desde  la  pág.  5  hasta  la 284 

—  V.  Carlos  V.  tomo  p.''. 80 

—  V.  Eraso  (Francisco  de) ,  tomo  5." 78 

—  V.  Villanueva  (Santo  Tomás  de),  tomo  5.°,   ......  74 

Colección  diplomática  de  los  documentos  á  que  se  refie- 
re la  disertación  del  feudalismo  particular  é  irredimible 
de  los  pueblos  del  reino  de  Valencia ,  de  donde  salieron 
expulsos  los  moriscos  en  el  ano  4()09,  tomo  48.   ...        5 

f^'olou  (D,  Bartolomé).  Noticias  para  su  vida,  tomo  46.    485 

—  Ilustraciones  y  documentos  relativos  á  la  misma,  tomo  16.    551 

Colon  (D.  Hernando),  Noticias  para  su  vida^  Ionio  16.  .     289 


«5 

Páginas. 


—  Notas  y  docuraentos  relativos  á  la  misma,  tomo  16.   .     3S3 

Celona  (el  cardenal  Pompe  yo),  tomo  23.   ...,.,      93 

Colona  (Marco  Antonio).  —  V.  Austria  (D.  Juan  de). — 
Copia  de  carta  que  este  escribió  á  D.  Juan  de  Zúñiga  en 
5  de  mayo  de  1372 ,  tomo  5.' ,   .   .   ,      83 

—  V.  Lepanto  (Batalla  de).  Relación  del  repartimiento  que 
se  hizo  de  los  bajeles,  artillería  y  esclavos  que  se  toma- 
ron de  los  turcos,  etc.  Tomo  S.' . 227 

Comunidades  de  Castilla, -^  Tomo  1.°,  pág.  271, 
289  y 530 

—  Documentos  relativos  á  las  Comunidades  de  Castilla, 
lomo  2." ,  pág.  30o  hasta  la  ,,.,,,,..,.   .     354 

— V,  Bravo  (Juan). 

—  V.  Sotomayor  (Pedro  de).  Su  sentencia  y  ejecución,  etc., 
tomo  11 ,   .   , 45o 

Condestable  de  Castilla.  —  Carta  que  escribió  á 
D.  Francisco  de  los  Cobos  ,  sobre  el  desafio  de  Carlos  V 
con  Francisco  I  rey  de  Francia,  tomo  1.**,   ,..,,,      47 

Confederaeion ,  alianza  y  pleito  homenaje  entre  va- 
rios grandes  el  año  de  1314,  siendo  gobernador  de  Cas- 
tilla el  Rey  Católico  Fernando  V,  tomo  8.°  .   .   .   .   ,   .     550 

—  Confederación  y  liga  firmada  entre  sí  por  el  marqués  de 
Villena,  conde  de  Altamira,  conde  de  Gelves,  duque  de 
Uceda,  el  de  Santistéban ,  duque  de  Alba,  el  de  Medina- 
sidonia  y  D.  Antonio  de  Toledo,  en  el  último  año  del  rei- 
nado de  Carlos  II ,  tomo  8.** 553 

C^ontreras  (Hernando  y  Pedro).— V.  Relación  de  varios 
sucesos  del  tiempo  de  los  Pizarros,  Almagros,  la  Gasea 
y  otros,  tomo  26 193 


Páginas. 

Coi*on. — Noticia  sobre  el  socorro  que  se  dio á Coron,  y 
del  combate  que  hubo  entre  la  armada  turca  y  la  cristia- 
na, tomo  13 509 

Correspondencia  de  D.  Dugo  de  Moneada  y  otros 
personajes  con  el  Rey  Católico  y  el  emperador  Garlos  V. 
tomo  24 79 

—  Id.  de  Felipe  II  con  D.  García  de  Toledo  y  otros ,  de  los 
años  1555  y  1566  sobre  los  preparativos  terrestres  y  ma- 
rítimos para  defender  la  Goleta,  Malta  y  otros  puntos 
contra  la  armada  del  turco ,  tomo  29  y  30. 

—  Id.  de  Felipe  II  y  de  otros  personajes  con  D.  Juan  de 
Austria,  desde  1568  hasta  1570,  sobre  la  guerra  contra 

los  moriscos  de  Granada,  tomo  28,  desde  la  pág.  5  hasta  la    154 

—  Id.  sobre  el  casamiento  de  D.  Sebastian,  rey  de  Portu- 
gal, con  dona  Isabel,  hija  segunda  del  emperador  de 
Austria,  desde  1567  hasta  1569,  tomo  28,  desde  la  pá- 
gina 425  hasta  la 563 

Cortes  de  Madrid ,  celebradas  por  el  señor  rey  D.  Car- 
los IV  en  1789,  tomo  17 5 

—  Id.  de  Toledo.— V.  Instrucción  de  lo  que  se  propuso  en 

las  cortes  de  Toledo  el  año  de  1470 ,  tomo  13 566 

Cortes  (Hernán). —  Relación  del  descubrimiento  y  con- 
quista de  Nueva  España  hecha  por  Hernán  Cortés ,  que 
envió  á  S.  M.  la  justicia  y  regimiento  de  Veracruz  en  10 
de  julio  de  1519,  tomo  1.° 410 

—  Noticia  bibliográfica  de  las  cinco  relaciones  que  envió 
Cortés  á  S.  M.  de  sus  descubrimientos  y  conquistas  en 
Nueva  España,  tomo  1.° 410 

—  Presentes  que  enviaron  á  S.  M.  Hernán  Cortés  y  la  jus- 
ticia y  regimiento  de  Veracruz  en  10  de  julio  de  1519, 
por  medio  de  dos  comisionados  ó  procuradores,  Alonso 
Fernandez  Portocarrero  y  Francisco  de  Montejo,  tomo  1 ."    461 

—  Cartas  que  escribió  Hernán  Corles  á  Carlos  V  sobre  la 


27 

Páginas. 


conquista  de  Nueva  España  y  descubrimiento  de  la  mar 
del  Sur,  y  las  varias  expediciones  quemando  hacer  para 
la  especiería.  La  1.*  desde  Cuyuacan  á  lo  de  mayo  de 
lo2-2:  la  2.^  de  Temixtitan  á  11  de  setiembre  de  1326: 
la  3.'  de  Temixtitan  con  la  misma  feaha  que  la  anterior, 
y  la  4.*  desde  Tezcuco  á  10  de  octubre  de  looO,  tomo  1.**      14 

—  Carta  ó  memorial  de  Cortés  á  Carlos  V.,  su  fecha  en  Ya- 
lladolid  á  o  de  febrero  de  lo44 ,  pidiéndole  mandase  jun^ 
tar  otros  jueces  para  la  determinación  del  pleito  que  te- 
nia pendiente  con  el  fiscal  del  Consejo  sobre  la  escritura 

de  merced  que  S.  M.  le  hizo,  tomo  1.*^ 41 

—  Id.  de  Cortés  al  obispo  de  Osma  Ü.  Fr.  García  deLoai- 
sa ,  su  fecha  en  Coadnavach  á  12  de  enero  de  1527 ,  en 
que  le  suplica  interponga  su  mediación  con  el  empera- 
dor para  las  cosas  que  pedia ,  y  le  da  cuenta  de  lo  su- 
cedido con  el  licenciado  Luis  Ponce  de  León  que  habia 
ido  á  tomar  la  residencia  de  orden  de  S.  M.,  y  con  un 
religioso  llamado  Fr.  Tomás  Ortiz,  tomo  I.'' 27 

—  Relación  de  los  conquistadores  y  descubridores  que  fue- 
ron con  Herpan  Cortés  á  la  conquista  de  Nueva  España, 
tomo  4.* 526 

—  Facsímile  de  la  ñrma de  Hernán  Cortés,  tomo  1.°.   .   .      46 

—  Relación  del  gasto  que  hizo  en  la  armada  que  aprestó  á 
sus  espensas  para  la  Especería,  tanto  en  dinero  como  en 
bastimentos  y  rescates ,  de  cuya  armada  fué  por  capitán 
Alvaro  de  Saavedra ,  tomo  2.° 40o 

—  Su  escudo  de  armas. — V.  Carlos  V.  tomo  2." .   ....     496 

—  Real  cédula  para  que  se  le  pagase  el  gasto  que  habia 
hecho  en  el  apresto  de  la  armada  del  Maluco.— V.  Car- 
los V.  tomo  2.«' 415 

—  Su  nombramiento  de  gobernador  de  las  islas  y  tierras 

que  descubriese  en  el  mar  del  Sur. — Y.  Carlos  Y.  tomo  2."    401 

—  Yenta  que  le  hizo  de  dos  navios  Juan  Rodriguez  de  Vi- 
llafuerte. — V.  Rodriguez  de  Yillafuerte  (Juan),  tomo  2."    416 

—  Relación  hecha  al  emperador  Carlos  Y.  sobre  la  expedi- 
ción de  Honduras.  De  Temixtitan  (Méjico)  á  o  de  scticm- 


28 

Páginas. 


bre  de  d526,  tomo  4.*' 8 

—  Instrucción  que  dio  en  1532  á  Diego  Hurtado  de  Men- 
doza ,  su  lugarteniente  de  capitán  general ,  para  el  viaje 
que  debia  hacer  en  el  armada  del  propio  Cortés,  al  des- 
cubrimiento de  la  tierra  nueva  del  mar  del  Sur,  tomo  4."    167 

—  Capítulo  de  carta  escrita  al  emperador  Carlos  V  desde 
Méjico,  con  fecha  2  de  abril  de  1532,  sobre  el  impedimen- 
to que  le  pusieron  el  presidente  y  oidores  de  la  audien- 
cia de  la  misma  ciudad  en  el  despacho  del  armada,  com- 
puesta de  cuatro  navios  que  aprestó  en  el  puerto  de  Aca- 
pulco  y  en  el  de  Teguantepeque ,  para  descubrir  el  mar 
del  Sur  y  socorrer  la  gente  de  otra  armada  que  envió  el 

año  de  1527  á  las  islas  de  Maluco,  tomo  4.° 175 

—  Relación  de  los  servicios  prestados  por  Hernán  Cortés, 
que  de  su  parte  presentó  á  S.  M.  el  licenciado  Nuñez, 

(sin  fecha)  tomo  4.° 178 

—  Auto  de  posesión  que  de  las  tierras  descubiertas  por  él 
en  el  mar  del  Sur,  tomó  en  el  puerto  y  bahía  de  Santa 
Cruz  en  1533 ,  conforme  á  la  capitulación  hecha  con  S.  M. 
tomo  4.° 190 

—  Carta  que  escribió  desde  Méjico  en  20  de  setiembre  de 
1538  al  presidente  del  Consejo  Real  de  las  Indias,  sobre 
la  armada  compuesta  de  nueve  navios  que  tenia  adereza- 
da en  la  costa  del  mar  del  Sur  en  Nueva  España  para  el 
descubrimiento  de  la  misma  mar ,  y  otros  particulares  de 
mercedes  que  habia  debido  á  la  piedad  del  rey  por  sus 
servicios,  lomo  4.° 193 

—  Memorial  á  Carlos  V  para  que  no  se  le  embarazase  en  la 
prosecución  del  descubrimiento  de  las  tierras  é  islas  del 
mar  del  Sur,  presentado  en  1539  en  los  autos  que  siguió 
Cortés  con  el  fiscal  de  S.  M.  ante  la  real  audiencia  de 
Méjico,  tomo 4." 201 

—  Instrucción  que  dio  en  1539  á  Juan  de  Avellaneda,  Jor- 
ge Cerón  y  Juan  Galvarro  para  la  relación  que  habían 
de  hacer  á  S.  M.  del  descubrimiento  del  mar  del  Sur ,  de 
las  cuatro  armadas  que  al  efecto  habia  despachado ,  y  de 


2d 

Páginas. 

otra  compuesta  de  cinco  navios  que  tenia  á  punto,  tomo  4.°    206 

—  Memorial  que  dio  á  S.  M.  en  Madrid  á  2o  de  junio  de 
4540  sobre  agravios  que  le  habia  hecho  el  virey  de  Nue- 
va España ,  D.  Antonio  Mendoza ,  estorbándole  la  prose- 
cución del  descubrimiento  de  las  costas  é  islas  del  mar 
del  Sur,  que  le  pertenecia  según  capitulación  hecha  con 
S.  M.  el  año  de  4529,  á  cuyo  efecto  habia  despachado 
ya  cuatro  armadas  y  descubierto  por  sí  y  sus  capitanes 
muchas  tierras  é  islas ,  de  cuyos  viajes  y  suceso  qué  tuvo 
hace  una  relación  sucinta ,  tomo  4." 209 

—  Relación  del  armada  de  Cortés ,  capitaneada  de  Francis- 
co de  Ulloa,  que  salió  del  puerto  de  Acapulco  y  descu- 
brió el  rio  de  la  Culata,  y  de  la  que  el  virey  de  Nue- 
va España  envió  con  un  Alarcon  para  el  mismo  efecto, 
tomo  4.° 248 

—  Memorial  que  hallándose  en  estos  reinos  dio  á  Carlos  V. 
en  que  hace  presentes  sus  dilatados  servicios  en  la  con- 
quista de  Nueva  España ,  por  las  que  pide  las  mercedes 

que  contiene  el  mismo ,  tomo  4.° 249 

—  Testimonio  de  su  hidalguía,  tomo  4.".   .......     238 

—  Su  testamento ,  tomo  4." 239 

— Testimonio  original  del  enterramiento  y  exhumación  del 

cadáver  de marqués  del  Valle,  que  fué  depositado 

en  4  de  diciembre  de  4547  en  el  convento  de  San  Isidro 

del  Campo ,  extramuros  de  Sevilla ,  tomo  22 563 

—  V.  Relación  que  los  alcaldes  é  regidores  de  la  villa  de  la 
Veracruz  escriben  á  S.  M.,  é  de  lo  que  ha  pasado  en  su 
viaje  é  población  (6  de  julio  de  4549),  tomo  4.° .  .   .   .        3 

—  V.  Audiencia  de  Santo  Domingo,  tomo  1.* 51i 

—  V.  Ayllon( El  Licenciado),  tomo  4." 476 

—  V.  Carlos  V.  tomo  4." 97 

—  V.  Martínez  (Benito),  tomo  4." 407 

—  V.  Montejo  (Francisco),  tomo  4.* 486 

—  V.  Velazquezí Diego),  tomo  4." 38o 

—  V.  Velazquez  de  Bazan  (D.  Antonio),  tomo  4.V  ...     232 

Corana  (Conde  de).— V.  Instrucción  v  advertimientos. 


80 

Páginas. 


que  el  virey  D.  Martin  Eoriquez  dejó  al....  (D.  Lorenzo 
Suarez  de  Mendoza)  su  sucesor  en  los  cargos  de  Nueva 
España,  tomo  26 373 

Cosa  (Juan  de  la). — V.  Isabel  (Reina  Católica  doña). 
Carta  á  los  oficiales  de  la  contratación  de  Sevilla  en  que 
se  habla  del  célebre  Juan  de  la  tosa ,  lomo  13 .  .   .   .  .    496 

Croiiíeoii  de  Valladolld ,  ¡lustrado  con  notas  por 
D.  Pedro  Sainz  de  Baranda,  tomo  13 3 

Cueva  (D.  Bartolomé  de  la),  cardenal,  tomo  23 163 

Daza  Chacón  (Dionisio). — Relación  verdadera  de  la 
herida  de  cabeza  del  Serenísimo  príncipe  D.  Carlos  nues- 
tro señor ,  de  gloriosa  memoria ,  la  cual  se  acabó  en  fin 
de  julio  del  año  1562 ,  tomo  18 537 

Delflnes,  hijos  de  Francisco  1."  rey  de  Francia. 

—  Su  prisión  en  la  fortaleza  de  Pedraza,  tomo  1.".   .   .   .     241 

—  Documentos  relativos  á  ios hijos  de  Francisco  1.** 

rey  de  Francia ,  durante  el  tiempo  que  estuvieron  en  re- 
henes en  España  á  consecuencia  del  tratado  de  Madrid 
de  14  de  enero  de  1526,  tomo  2."  desde  la  pág.  209  has- 
ta la 258 

Denia  (Marqués  de). — Carta  que  escribió  á  Francisco  de 
los  Cobos  á  19  de  junio  de  1528,  sobre  el  desafio  de  Car- 
los V  con  Francisco  1.°  rey  de  Francia,  tomo  1,°.   .   .      73 

Dociimcntos  sobre  las  causas  que  dieron  motivo  á  la 
prisión  de  D.  Fadrique,  hijo  del  duque  de  Alba,  y  tam- 
bién á  la  del  mismo  duque,  tomo  7.°,  pág.  464  y  si- 
guientes, 

—  Documentos  (nuevos)  sobre  el  mismo  asunto,  tomo  8."    483 

—  Id.  relativos  á  Antonio  Pérez ,  secretario  que  fué  de  Fe- 
lipe 2.°,  tomo  12,  desde  la  pág.  5  bástala 574 


SI 

Páginas. 

-  Documentos  relativos  á  D.  Alonso  de  Guzman  el  Bue- 
no, sétimo  duque  de  Medinasidonia ,  tomo  28,  desde 
la  pág.  364  hasta  la 424 


Dolld  (Cristóbal).  —  V.  Audiencia  de  Santo  Domingo, 
tomo  4.° 511 

Domínguez  (Francisco) ,  geógrafo  de  S.  M. — Carta  que 
escribió  á  Felipe  II  desde  Méjico  á  30  de  diciembre  de 
1381 ,  para  que  mandase  al  virey  D.  Martin  Enriquez 
remitiese  á  S.  M.  la  descripción  de  Nueva  España  qué 
habia  trabajado,  tomo  i." 379 

—  V.  pág.  104  del  tomo  27. 

Doria  (Antonio). —  Parecer  que  dio  juntamente  con  don 
Juan  de  Austria  sobre  desmantelar  la  fortaleza  de  Tú- 
nez, tomo  3.** 159 

Doria  (Juan  Andrea).  Cartas  á  Felipe  II. — Carta  sobre  el 
mejor  modo  de  traer  á  España  el  oro  y  plata  de  América, 
y  otras  cosas  tocantes  al  servicio  de  S.  M.,  tomo  2.°  .   .     171 

Doria  (Marcelo). —  Carta  á  D.  Juan  de  Austria  avisando 
las  noticias  que  habia  tenido  del  armada  del  turco.  Otran- 
to  7  de  agosto  de  1575 ,  tomo  3.° 119 

—  Id.  reclamando  los  sueldos  que  se  debian ,  y  pidien- 
do algunas  mercedes  á  S.  M. ,  tomo  2.° 174 

—  Id.  sobre  el  mejor  gobierno  de  las  armadas  de  S.  M., 
tomo  2.° 176 

—  Id.  en  que  tratando  de  cuáles  eran  á  su  juicio  las  me- 
jores fortificaciones ,  habla  del  maestre  de  campo  César 
de  Eboli  y  del  ingeniero  Francisco  de  Rojas,  11  de  se- 
tiembre de  1397.  tomo  2.° 19o 

—  Dictamen  que  dio  á  Felipe  II  sobre  la  fortificación  de 
Cartagena ,  tomo  2.° 183 

—  Id.  sobre  la  de  Cádiz ,  11  de  agosto  de  1397.  tomo  2.°.     189 

—  Id.  á  D.  Juan  de  Austria  avisando  las  noticias  que  ha- 


S 


52 

Páginas. 


bia  tenido  del  armada  del  turco;  Otranto  7  de  agosto  de 
d573,  toinoo."  .   ................     129 

—  V.  Felipe  IMomo  3." .   .............     484 

—  V.  Carlos  V,  tomo  1." 207 

—  Y.  tomo  2.°,  página  171  y  siguientes. 

Ebtfli.  (D.  César).  — V.  Doria  (Juan  Andrea),  tomo  2.**.     193 

Eboli  (princesa  de). — Su  prisión  >  tomo  1.** .   .....      9o 

Eboli  (príncipe  de). — Carta  al  arzobispo  de  Bufgos  don 
Francisco  de  Mendoza  (sobre  el  casamiento  de  Felipe  II 
con  doña  Isabel  de  Yalois).  Yalladolid  15  de  agosto  de 
1559,  tomo  3." 420 

—  Y.  Mendoza  (D.  Francisco  de)  cardenal  y  arzobispo  de 
Burgos ,  tomo  5/   ................     421 

Enrt<|iic  (cardenal  D.),  rey  de  Portugal.— Y.  Felipe  II. 
Correspondencia  con  varias  personas  etc.,  tomo  6.'  des- 
de la  pág.  25  hasta  la   . 666 

Enrique  (D.  Juan  Alfonso),  almirante  de  Castilla,  to- 
mo 23.    .................   ^  .   .    323 

Enrique  IBI. — Testimonio  de  una  escritura,  que  aquí 
se  llama  carta  de  cuaderno ,  otorgada  por  Enrique  III  en 
Yalladolid  á  17  de  junio  de  1401,  en  que  arrienda  por 
dos  años  las  penas  de  cámara  de  Burgos  y  pueblos  de  su 
obispado ,  y  se  expresa  en  ella  cuales  eran  estas  penas, 
lomo  14 409 

Enrique  IV. — Peticiones  originales  hechas  al  seiior  rey 
D.  Enrique  lY  por  diferentes  arzobispos,  obispos,  caba- 
lleros y  grandes  de  estos  reinos,  tomo  11 369 

Enrique  IV  tle  Franela. — V.  Cárdenas  (D.  lííigo 


úo 

Páginas. 


de) ,  torao  5." 137 

Enriques  (D.  Martin),  vireyde  Méjico. — Instrucción 

y  advertimientos  que  el  virey dejó  al  conde  de  Co- 

ruña  (D.  Lorenzo  Suarez  de  Mendoza)  su  sucesor  en  los 

cargos  de  Nueva  España,  lomo  26 373 

— Y.  Dominguez  (Francisco)  geógrafo  de  S.  M.,  tomo  1.°.     379 
—Y.  Felipe  II,  lomo  1."  •   •  •   • 361 

Eraso  (D.  Francisco  de). —  Copia  de  relación  que  hace 
el  capitán...  de  lo  ocurrido  en  la  toma  del  Peíion  (lo64), 
tomo  28 569 

—  Carta  á  Francisco  de  los  Cobos  en  que  le  habla  de  al-        i 
gunos  obispados  vacantes  y  de  los  que  aspiraban  á  ellos, 
tomo  o.' 78 

—  V.  Alba  (duque  de) ,  tomo  A." 349 

— Y.  Mendoza  (D.  Francisco  de)  cardenal  y  arzobispo  de 

Burgos,  tomo  3." 427 

Eseobap  (Francisco  de). — Discurso  de  la  jornada  que  se 
ha  hecho  con  las  galeras  que  adelante  se  expresarán  en 
este  año  de  lo64  por  mandado  de  la  Majestad  del  rey  de 
España  D.  Felipe  II  etc.,  siendo  capitán  general  de  la 
mar  el  excelente  señor  D.  García  de  Toledo. — Refiere  la 
conquista  del  Peñón  de  la  Gomera,  tomo  ii o04 

Escorial. — Su  fundación,  su  fábrica  etc. — V.  San  Ge- 
rónimo (Fr.  Juan  de).  Sus  memorias,  donde  hay  muchas 
noticias  de  los  principios ,  progreso  y  fin  de  dicho  monas- 
terio, torao  7.°,  pág.  3  y  siguientes. 

—  Copia  de  otra  de  letra  coetánea ,  sin  autor  ni  fecha ,  de 
una  Memoria  sobre  la  erección  y  fundación  de  San  Lo- 
renzo el  lieal ,  torao  28 564 

Escrituras  de  confederación ,  otorgada  en  19  de  febre- 
ro de  1473  ante  el  cronista  Alonso  de  Falencia,  en  que 


u 

Páginas. 

D.  Enrique  de  Guzman,  duque  de  Medinasidonia ,  re- 
conoce y  jura  á  D.  Fernando  y  Dolía  Isabel  por  here- 
deros de  los  reinos  de  Castilla  y  León,  y  el  licenciado 
D.  Alonso  López  de  la  Cuadra  á  nombre  y  en  virtud  de 
poder  de  dichos  príncipes  le  hace  merced  del  maestrazgo 
de  Santiago,  que  le  tenia  usurpado  D.  Juan  Pacheco, 
tomo  21 533 

Escuadra  española. — Combate  que  tuvo  una....  en 
que  iba  embarcado  Carlos  V  con  otra  francesa  en  las  in- 
mediaciones de  Marsella ,  según  carta  de  un  anónimo, 
escrita  desde  las  islas  Hieres  á  7  de  mayo  de  iSo8,  to- 
mo 2." 392 

Estado  de  la  caballería  ligera,  arcabuceros  á  caballo  é 
infantería  española  que  llevó  el  duque  de  Alba  á  Flán- 
des  (1567),  tomo  4.» 382 

—  Id.  de  los  capitanes  de  gente  de  armas ,  caballeros  del 
Toisón  y  gobernadores  de  provincias  y  de  villas  particu- 
lares que  habia  en  Flándes  en  el  año  1567 ,  tomo  4.'*  .     384 

Felipe  I,  llamado  el  Hermoso. — Cartas  á  diferentes  per- 
sonas, tomo  8.°,  desde  la  pág.  268  hasta  la 384 

—  V.  Fernando  V. — Carta  á  Gonzalo  Ruiz  de  Figueroa  su 
embajador  en  Venecia ,  dándole  cuenta  de  todo  lo  que  le 
habia  ocurrido  con  su  yerno  Felipe  I,  etc.,  tomo  8."   .     385 

—  Su  crónica. — Y.  Padilla  (Lorenzo  de),  tomo  8.',  desde 

la  pág.  primera  hasta  la 267 

—  Y.  Parra  (doctor). — Su  carta  al  Rey  Católico,  dándole     ^a 
noticia  de  la  enfermedad  y  muerte  de  Felipe  I ,  acaecida 

en  Burgos  á  25  de  setiembre  de  1506 ,  tomo  8.''  .   .   .     394 

—  Y.  Isabel  (Reina  Católica  doña). — Documentos  relativos 
al  gobierno  de  estos  reinos,  muerta  la  Reina  Católica 
doña  Isabel ,  entre  Fernando  Y ,  su  hija  doña  Juana  y 
el  marido  de  esta  Felipe  I,  tomo  14,  desde  la  pág.  285 
hasta  la 352 


do 

Páginas. 


Felipe  II. — Su  viaje  á  Inglaterra  cuando  fué  á  casar  con 
la  reina  Doña  María,  tomo  1.° o64 

—  Real  despacho  enviado  á  D.  Martin  Enriquez  virey  de 
Méjico ,  mandándole  que  con  objeto  de  componer  la  his- 
toria de  Indias  remitiese  cuantas  noticias  pudiese  adqui- 
rir de  las  personas  que  hubiesen  escrito  sobre  la  con- 
quista y  población  de  aquellos  reinos,  tomo  i."  ,   ,   .   .     561 

—  Su  correspondencia  con  Fernando  I  emperador  de  Ale- 
mania.— V.  Fernando  I ,  tomo  2." 419 

—  De  algunos  sucesos  que  precedieron ,  acompañaron  y  si- 
guieron su  matrimonio  con  Doña  María  reina  de  Ingla- 
terra, tomo  o.°,  pág.  448  hasta  la 538 

—  Título  de  general  de  la  mar  que  dio  á  D.  Juan  de  Aus- 
tria. Madrid  lo  de  enero  de  4o68,  tomo  5."   504 

—  Copia  de  las  instrucciones  que  dio  á  D.  Juan  de  Austria 
cuando  le  nombró  capitán  general  de  la  mar.  Madrid  lo 

de  enero  de  1368,  tomo  3.° olí 

—  Título  de  lugarteniente  de  general  de  la  mar  que  dio  á 
D.  Luis  de  Requesens.  Madrid  22  de  marzo  de  lo68, 
tomo  3.° 509 

—  Cédula  declarando  que  en  ausencia  de  su  hermano  don 
Juan  de  Austria  ó  de  su  lugarteniente  general  D.  Luis 
de  Requesens ,  Juan  Andrea  Doria  precediese  y  mandase 
á  los  generales  de  las  escuadras  de  España ,  Ñapóles  y 
Sicilia  siempre  que  se  juntaren.  Madrid  1."  de  mayo  de 
iS71 ,  tomo  3.» 184 

Casamiento  de  Felipe  II  con  Doña  Isabel  de  Valois, 

—  Recibimiento  que  mandó  hacer  Felipe  II  á  su  tercera 
muger  doña  Isabel  de  Valois  cuando  esta  vino  de  Fran- 
cia á  desposarse  con  él ,  tomo  3.°,  pág.  418  hasta  la.    .     448 

—  Carta  al  arzobispo  de  Burgos  D.  Francisco  de  Mendoza 
(sobre  el  mismo  asunto).  Gante  3  de  agosto  de  15S9, 
tomo  o° 418 

—  Id.  á  id.  Laredo  6  de  setiembre  de  loo9 ,  tomo  3.°  .   .    422 


50 

Páginas. 


—  Carta  á  id.  Del  Bosque  de  Aranjuez  á  19  de  octubre  de 
4559,  tomo  3.° 423 

—  Id.  á  id.  Madrid  15  de  noviembre  de  1559 ,  tomo  3.°   .     425 

—  Id.  á  id.  y  al  duque  del  Infantado.  Pardo  26  de  enero 

de  1560,  tomo  3." 429 

—  Id.  á  id.  y  al  duque  del  Infantado.  — Instrucción  para 
ambos  sobre  el  recibimiento  de  la  reina  Isabel  de  Yalois. 
Aranjuez  23  de  noviembre  de  1559,  tomo  5."   ....     429 

—  Id.  á  id.  y  al  duque  del  Infantado. — Poderes  otorgados 
á  ambos  para  que  pudiesen  entregarse  de  la  Serenísima 
reina  Doña  Isabel  de  Yalois.  Aranjuez  23  de  noviembre 

de  1559,  tomo  5." 437 

—  Id.  á  id.  y  al  duque  del  Infantado. — Instrucción  de  lo 
que  debian  hacer  el  dia  de  la  entrega  de  la  Serenísima 
reina  Doña  Isabel  de  Yalois.  Toledo  diciembre  de  1559, 
lomo  3." 445 

—  Lo  que  el  Sr.  D.  Lope  de  Guzman,  maestresala  de  ia 
reina(do5a  Isabel  de.Valois),  debia  hacer  con  los  señores 
cardenal  de  Burgos  y  duque  del  Infantado,  tomo  5." .   .     445 

—  Carla  de  Felipe  II  al  arzobispo  de  Burgos  recomendán- 
dole á  Lope  de  Guzman ,  maestresala  de  la  Reina  (doña 
Isabel  de  Yalois).  Toledo  6  de  diciembre  de  1559,  lo- 
mo 3."  447 

—  Sumario  de  los  capítulos  del  tratado  de  matrimonio  en- 
tre Felipe  II  y  la  hija  mayor  del  rey  Enrique  de  Francia 
(doña  Isabel  de  Yalois) ,  tomo  3.° 438 

«—  Relación  que  dio  el  embajador  del  cristianísimo  rey  de 
Francia,  que  reside  en  esta  corte,  tomo  3.° 439 

—  Id.  de  las  jornadas  que  la  reina  de  España  (doña  Isabel 
de  Yalois)  ha  de  hacer  para  ir  desde  Portiers  (Poitiers) 

á  Pamplona ,  que  enviaron  de  Francia ,  tomo  5.'   ...     441 

—  Lo  que  S.  M.  ha  acordado  y  determinado  cerca  de  la  ve- 
nida de  la  Católica  reina  Isabel  su  muger  á  estos  reinos 

de  España,  tomo  3.' 442 


o7 

Páginas. 


—  Carta  á  D.  García  de  Toledo  dándole  aviso  de  la  liga 
que  se  trataba  con  la  República  de  Venecia.  Sevilla  26 

de  mayo  de  1570 ,  tomo  3.' 361 

—  Id.  al  mismo  en  que  le  avisa  haber  recibido  las  suyas 
tocante  á  la  liga  con  venecianos,  y  se  muestra  satisfecho 
de  su  conducta  en  la  parle  que  había  tenido  en  esta  ne- 
gociación. Escorial  io  de  julio  de  io70 ,  tomo  3.'  .   .   .     356 

—  Id.  á  D.  Juan  de  Austria  haciéndole  saber  que  habia 
nombrado  por  confesor  de  S.  A.  á  Fr.  Juan  Machuca        V 
franciscano,  y  por  companeros  de  este  para  que  confesa-       **I 
sen  en  las  galeras  y  ejército  á  Fr.  Alonso  Serrano  y  fray 
Juan  de  Xuara,  religioso  de  la  misma  orden.  Escorial  10 

de  junio  de  1371 ,  tomo  3." 186 

—  Td.  al  mismo  recomendándole  la  mayor  brevedad  en  la 
jornada  que  iba  á  emprender.  Madrid  20  de  jimio  de 
1571,  tomo  3.° 187 

—  Id.  al  mismo  diciéndole  que  se  alegraba  mucho  de  su 
llegada  á  Barcelona,  y  que  aprobaba  cuanto  habia  pro- 
veído relativo  á  su  partida.  Madrid  27  de  junio  de  1571, 
tomo  3.» 189 

—  Id.  al  mismo  en  que  le  encarga  que  vaya  á  Mesina  cer- 
ca de  la  persona  de  D.  Juan  de  .\ustria  para  ayudarle 
con  sus  consejos  y  experiencia.  Madrid  28  de  setiembre 

de  1371 ,  tomo  3.» 557 

—  Id.  al  mismo  en  que  le  pide  parecer  sobre  asientos  de 
armadas  con  Juan  Andrea  Doria  y  otros  particulares  que 
scrvian  á  S.  M.  Madrid  7  de  octubre  de  1571 ,  tomo  3.*.     358 

—  Id.  al  mismo  en  que  le  da  gracias  por  la  buena  volun- 
tad que  habia  mostrado  de  ir  á  servir  cerca  de  la  perso- 
na de  D.  Juan  de  Austria.  San  Lorenzo  22  de  diciembre 

de  1571 ,  lomo  3.' 360 

—  Id.  al  mismo  mandándole  que  diga  la  forma  que  se  ha- 
bia de  tener  para  conservar  el  estado  de  las  cosas  de  la 
mar  según  se  hallaban  á  la  sazón ,  oyendo  á  D.  García 
do  Toledo,  al  cardenal  Granvela  y  al  duque  de  Sesa.    . 
.\ranjuez  9  de  mayo  de  1375,  tomo  3.' 115 


Páíjinas. 

—  Carta  al  mismo  pidiéndole  le  diga  su  dictamen  acerca 
de  entretener  en  el  reino  de  Ñapóles  las  cincuenta  galeras 
que  se  habian  armado.  Aranjucz  11  de  mayo  de  1375, 
tomo  5.° 116 

—  Sumario  de  las  razones  en  pro  y  en  contra  que  envió  Fe- 
lipe ÍI  á  D.  Juan  de  Austria  sobre  mantener  ó  desmante- 
lar la  fortaleza  de  Túnez,  tomo  3.° 138 

—  Carta  en  cifra  á  D.  Luis  de  Requesens,  en  que  le  dice 
que  habia  recibido  dos  cartas  suyas,  entendiendo  por  la 
primera  la  llegada  á  Genova  de  los  príncipes  sus  sobri- 
nos y  de  su  hermano ,  y  por  la  segunda  lo  ocurrido  en 
aquella  República  sobre  lo  de  Final.  Añade  que  aprueba 
su  diligencia  en  haber  averiguado  el  dinero  que  el  duque 
de  Florencia  tenia  en  Francia ,  y  censura  la  conducta  del 
alcaide  Peralta  con  el  marqués  de  Santa  Cruz  al  pasar 
este  por  Liorna.  Madrid  7  de  setiembre  de  1571,  to- 
mo 3." 193 

—  Id.  al  mismo  D.  Luis  de  Requesens  sobre  desavenencias 
que  este  habia  tenido  con  D.  Juan  de  Austria.  Madrid  7 

de  setiembre  de  1371,  tomo  5.° 194 

—  Id.  al  mismo  en  que  le  dice  holgaba  mucho  de  haber  sa- 
bido la  llegada  de  su  hermano  D.  Juan  de  Austria  á  Ña- 
póles y  después  á  Mesina ,  y  que  su  armada  estuviese  en 
tan  buen  orden ,  con  otras  cosas  relativas  á  la  empresa 
de  Túnez  y  Biserta.  Madrid  28  de  setembre  de  1371, 
tomo  3-°.  " 193 

—  Id.  al  mismo  en  que  le  dice  que  por  sus  cartas  ha  sali- 
do del  cuidado  en  que  estaba  sobre  la  certeza  de  la  victo- 
ria de  Lepanto ,  y  le  da  gracias  por  la  parte  que  habia 
tenido  en  ella  como  lugarteniente  de  D.  Juan  de  Austria. 

San  Lorenzo  23  de  noviembre  de  1371 ,  tomo  3.°,  .   .    .     237 

—  Id.  á  D.  Juan  de  Zúñiga  sobre  el  repartimiento  de  la 
presa  ganada  en  la  batalla  de  Lepanto.  San  Lorenzo  2o 

de  noviembre  de  1371,  tomo  5.° 234 

—  Id.  á  su  hermana  Margarita,  gobernadora  de  Flándes, 
en  que  le  manifiesta  su  pesar  por  las  alteraciones  de 


39 

Páginas. 

aquellos  Estados  y  por  las  quejas  contra  el  cardenal  Gran- 
vela,  añadiendo  que  nunca  pensó  introducir  la  Inquisi- 
ción de  España  en  Flándes ,  con  algunas  prevenciones 
sobre  Simón  Renard.  Madrid  47  de  junio  del  año  lo62, 
tomo  4.° 278 

—  Carta  á  la  misma  en  que  se  queja  de  Montigny ,  y  le  en- 
carga que  procure  entretener  los  negocios  para  'ganar        i 
tiempo.  Madrid  2o  de  febrero  de  lo6o  ,  tomo  4."  .    .   .     28-t 

—  Id.  á  la  misma  en  que'elogiando  su  conducta  en  el  gobier- 
no de  Flándes ,  le  habla  del  conde  de  Egmont ,  del  car- 
denal Granvela  y  de  la  expedición  contra  el  Peñón  de 
Vélez.  Madrid  10  de  agosto  de  lo65 ,  tomo  4.°  .    .   .   .     286 

—  Id.  á  la  misma  sobre  no  hacer  innovación  en  lo  de  los 
obispados,  con  otras  cosas  sobre  ayuda  de  costas  de  las        -  — 
guarniciones,  y  vuelta  de  Armenteros  á  Flándes.  Barcelo-        a 
na  19  de  febrero  de  1364,  tomo  4.° 300 

—  Id.  á  la  misma  en  que  dice  se  alegraba  del  mejor  aspec- 
to que  habian  tomado  las  cosas  de  Flándes  después  de  la 
vuelta  de  Armenteros  allá,  con  otras  cosas  relativas  al 
gobierno  de  aquellos  Estados.  Valencia  23  de  abril  de 
1364,  tomo  4." 307 

—  Id.  al  cardenal  Granvela  en  que  le  dice  la  satisfacción 
que  habia  tenido  por  su  salida  de  Flándes ,  llevado  del 
amor  á  su  servicio.  Madrid  3  de  agosto  de  1564,  tomo  4.'.     313 

—  Id.  á  su  hermana  Margarita  diciéndole  que  habia  man- 
dado salir  de  Roma  á  su  embajador,  y  variar  la  cifra  para 

la  correspondencia.  Madrid  6  de  agosto  de  1364,  tomo  4." .     314 

—  Cédulas  que  expidió  para  la  mejor  observancia  de  los 
decretos  del  Concilio  de  Trento.  Madrid ,  desde  4  de  se- 
tiembre de  1364  á  21  de  enero  de  1363,  tomo  9.°.   .   .     368 

—  Id.  á  la  misma  en  que  le  avisa  lo  que  habia  tratado  con  el 
conde  de  Egmont  sobre  el  Consejo  de  Estado  y  personas 
que  debían  componerle,  con  otros  puntos  casi  todos  rela- 
tivos á  dicho  conde.  Madrid  3  de  abril  de  1363 ,  tomo  4." .     320 

—  Id.  á  la  misma  en  que  habla  principalmente  del  conde 


Páginas. 


de  Egmont,  y  del  modo  de  juzgar  á  Simón  Renard.  Aran- 
juez  7  de  abril  de  1565,  tomo  4." 316 

-  Carta  á  la  misma  que  entre  otros  muchos  puntos  de  que 
trata,  le  encarga  principalmente  la  observancia  del  Con- 
cilio de  Trento,  la  celebración  de  concilios  provinciales,  y 
que  no  se  afloje  en  nada  con  respecto  á  la  Inquisición  de 
riándes  para  el  debido  castigo  de  los  herejes.  Bosque  de 
Segovia  20  de  octubre  de  1365,  tomo  4.° 526 

-  Id.  al  cardenal  Granvela  en  la  que  agradece  sus  adver- 
tencias para  deshacer  la  liga  de  Flándes ,  y  le  encarga 
que  continúe  dándole  aviso  de  lo  que  supiere ,  con  otras 
cosas  relativas  á  la  situación  de  los  Paises  Bajos.  Madrid 

i7  de  febrero  de  1567,  tomo  4." 537 

-  Cédula  dirigida  al  duque  de  Alba  concediéndole  facultad 
para  proceder  en  los  Paises  Bajos  contra  los  caballeros 
del  Toisón,  que  fuesen  autores  ó  cómplices  de  rebelión 
no  obstante  los  privilegios  de  la  orden.  Aranjuez  15  de 
abril  de  1567 ,  tomo  ^.^ 344 

-  Carta  al  mismo  contestando  á  las  observaciones  que  el 
duque  habia  hecho  en  carta  de  27  de  abril  del  mismo  año 
al  encargarle  el  mando  del  ejército  de  los  Paises  Bajos. 
Madrid  4  de  mayo  de  1567  ,  lomo  4." 358 

-  Id.  al  cardenal  Granvela  en  que  le  participa  su  resolu- 
ción de  pasar  á  Flándes ,  el  estado  de  sus  relaciones  con 
el  papa,  con  otros  puntos  concernientes  á  los  Paises  Ba- 
jos. Madrid  12  de  julio  de  1567,  tomo  4."  573 

-  Ordenanza  contra  los  que  á  causa  de  las  alteraciones  de 
los  Estados  de  Flándes  quisiesen  ausentarse  ó  transportar 
y  llevar  fuera  de  ellos  sus  bienes  y  muebles.  Bruselas  18 

de  setiembre  de  1567,  tomo  4.° 439 

-  Carta  al  duque  de  Alba  en  que  contesta  á  varias  de  sus 
cartas  sobre  los  negocios  de  Flándes.  Madrid  H  de  oc- 
tubre de  1567,  tomo  4." 473 

-  Id.  al  cardenal  Granvela  respondiendo  á  varias  cartas 
suyas.  Madrid  28  de  noviembre  de  1567,  tomo  4.".  .   .    478 


41 

Páginas. 


-  Carla  al  duque  de  Alba  en  que  le  dice  que  los  desmanes 
de  su  hijo  el  príncipe  D.  Carlos  le  habian  obligado  á  en- 
cerrarle y  ponerle  guardas  de  manera  que  no  comunicase 
sino  con  las  personas  que  tuviesen  su  real  permiso.  Ma- 
drid 25  de  enero  de  1368 ,  tomo  4." 484 

-  Id.  que  escribió  á  D.  Juan  de  Zúñiga  su  embajador  en 
Roma ,  sobre  reformación  de  órdenes  religiosas.  Aran- 
juez  14  de  mayo  de  lo68,  tomo  7.° 529 

-  Id.  al  duque  de  Alba  sobre  la  licencia  que  pedia  para 
retirarse  del  gobierno  de  los  Paises  Bajos.  San  Geróni- 
mo cerca  de  Córdoba  4  de  abril  de  4570,  tomo  4.°  .    .     521 

-  Correspondencia  con  varias  personas,  y  principalmente 
con  D.  Cristóbal  de  Moura  ó  Mora ,  su  embajador  en  la 
corte  de  Lisboa ,  sobre  asuntos  concernientes  á  la  suce- 
sión de  la  corona  de  Portugal  durante  el  reinado  del  car- 
denal D.  Enrique,  tomo  6.°,  desde  la  pág.  2o  hasta  la.    666 

-  Ordenanzas  para  los  torcedores  de  seda  de  Toledo. 
Madrid  22  de  octubre  de  1573,  tomo  15 363 

-  Cédula  original  para  que  Diego  de  Olarte  entregue  al 
prior  y  convento  de  Nuestra  Señora  de  Atocha  un  crucifijo 
de  oro  que  le  mandó  dar  de  limosna  el  príncipe  D.  Car- 
los. San  Lorenzo  2  de  abril  de  1577,  tomo  28 567 

-  Instrucción  de  que  vos  el  Ule.  D.  Alonso  de  Guzman  e! 
Bueno ,  duque  de  Medinasidonia  ,  nuestro  primo ,  habéis 
de  hacer,  y  orden  que  habéis  de  guardar  en  el  ejercicio 
y  administración  del  cargo  que  vos  habernos  proveído  de 
nuestro  gobernador  y  capitán  general  en  el  Estado  y  do- 
minio de  Milán.  Convento  de  Thomar  en  Portugal  á  24 

de  abril  de  1581 ,  tomo  24 554 

-  V.  Agustin  (D.  Antonio)  arzobispo  de  Tarragona,  to- 
mo ó." 270 

-  V.  Alba  (Duque  de),  tomo  o.",  pág.  283  y  tomo  4.° 

-  Y.  Id. — Copia  de  carta  del  duque  de  Alba  cá  Felipe  II 
sobre  la  autoridad  y  derechos  que  S.  M.  como  conde  de 
Borgoiía  tiene  sobre  Besanzon ,  tomo  14 434 

-  V.  Austria  (D.  Juan  de),  lomo  3.' 


42 

Páginas. 


—  V.  Domínguez  (Francisco)  tomo  1." 379 

—  V.  Enriquez  (D.  Martin)  virey  de  Méjico  tomo  1.°.   .   .     379 

—  Y.  II)arra  (Francisco),  lomo  3." 203 

—  V.  Mendoza  (D.  Francisco  de) ,  cardenal  y  arzobispo  de 
Burgos. 

—  V.  Tedrosa  (Francisco  de)  tomo  3.° 289 

—  V.  Hernández  (Doctor  Francisco)  tomo  1." 362 

—  V.  Arracnteros ,  lomo  4.° 302 

—  V.  Mendivii  (Miguel  de),  tomo  4.°,  pág.  397  y  .   .    .     421 

—  V.  Montigny  (Documentos  relativos  á  la  prisión  y  muerte 

de),  lomo  4.",  desde  la  pág.  526  hasta  la 566 

—  V.  Mogrovejo  (Santo  Toribio  de),  lomo  5.° 185 

—  V.  Valencia  (Cabildo  de  la  santa  iglesia  de) ,  lomo  5.°  .      82 

—  V.  Yillanueva  (Santo  Tomás  de),  tomo  5." 74 

—  Y.  San  Gerónimo  (Fr.  Juan  de). — Memorias  sobre  varios 
sucesos  del  reinado  de  Felipe  II,  tomo  7.°  página  5  y 
siguientes. 

—  Y.  Toledo  (D.  Fadrique  de),  hijo  del  duque  de  Alba.— 
Causas  que  dieron  motivo  á  su  prisión  y  á  la  de  su  pa- 
dre, tomo  7.» 464 

—  Y.  Documentos  (nuevos)  sobre  las  causas  que  dieron 
motivo  á  la  prisión  de  D.  Fadrique,  hijo  del  duque  de 
Alba,  y  también  á  la  del  mismo  duque.  Donde  hay  una 
larga  correspondencia  entre  D.  Antonio  de  Pazos  y  Feli- 
pe II,  tomo  8.°  483 

—  Y.  Armada  invencible ,  tomo  14 449 

—  Y.  Correspondencia  de  Felipe  II  con  D.  García  de  To- 
ledo y  otros,  de  los  años  1565  y  1566,  sobre  los  pre- 
parativos terrestres  y  marítimos  para  defender  la  Go- 
leta, Malta  y  otros  puntos  contra  la  armada  del  turco,  lo- 
mo 29  y  30. 

—  Y.  Id.  con  el  duque  de  Medinasidonia  sobre  su  derecho 
á  la  corona  de  Portugal ,  y  ocupación  deste  reino  des- 
pués de  la  muerte  del  cardenal  D.  Enrique,  tomo  27,  des- 
de la  pág.  210  hasta  la 398 

—  Y.  Correspondencia  de  Felipe  II  y  de  otros  personajes 


43 


con  D.  Juan  de  Austria,  desde  1368  hasta  ioTO,  sobre 
la  guerra  contra  los  moriscos  de  Granada,  tomo  28,  des- 
de la  pág.  o  hasta  la lo4 

— V.  Id.  con  varias  personas  sobre  el  casamiento  de  D.  Se- 
bastian ,  rey  de  Portugal ,  con  doña  Isabel ,  hija  segun- 
da del  emperador  de  Austria ,  desde  do67  hasta  lo69, 
tomo  28 ,  desde  la  página  42o  hasta  la 563 

—  Y.  Instrucción  que  dio  Felipe  II  á  los  del  Consejo  de  Ita- 
lia, en  Toledo  á  3  de  diciembre  de  loo9,  tomo  21 .   .   .     o69 

— V.  Id.  la  que  dio  al  licenciado  Gasea  para  la  pacificación 
de  los  reinos  del  Perú,  tomo  26 274 

—  V.  Ziíñiga  (Fr.  Autonio  de) ,  tomo  26 87 

—  V.  Toledo  (D.  Francisco  de) ,  tomo  26 122 

—  V.  Mendoza  (D,  García  de)  Carta  á  Felipe  II  avisán- 
dole la  sujeción  de  Arauco ,  tomo  26 211 1 

Felipe  III.— V.  Cárdenas  (D.  Iñigo  de),  tomo  o."  .   .     137 

—  V.  Montes  Claros  (marqués  de) ,  tomo  2o 162 

Felipe  IV. — Fundación  que  hizo  en  162o  de  unos  eslu- 
dios generales  en  el  colegio  imperial  de  jesuítas  de  Ma- 
drid, tomo  5." 518 

—  Orden  que  dio  á  su  hijo  D.  Juan  de  Austria,  capitán  ge- 
neral de  Cataluña,  mandándole  que  no  admitiese  despa- 
chos de  Roma  á  favor  de  eclesiásticos  que  no  fuesen  adic-         .-^g 
tos  á  su  real  persona.  Madrid  3  de  Setiembre  de  16o5  to- 
mo 8.*'  ..   .   566 

—  Otra  orden  al  arzobispo  de  Tarragona  acerca  del  mismo 
asunto.  Madrid  3  de  setiembre  de  16o9,  tomo  8.°.    .   .     367 

—  Y.  Aznar  (Fr.  Andrés),  tomo  3.° 135 

—  Y.  Sobremonte  (D.  Gaspar  de),  tomo  o.",  págs.  134  y.  133 

—  Y.  Terranova  (duque  de),  tomo  3." 132 

—  V.  Tribuido  (cardenal  Teodoro),  tomo  3.** 126 

—  Y.  Turriano  (Leonardo) ,  tomo  3." 189 

Ferias.— V.  Medina  del  Campo,  tomo  17 341 


44 

Páginas. 

Fernandez  de  Castro  (D.  Pedro),  conde  de  Lemos, 
lomo  23 SOO 

Fernandez  de  Córdoi'a  (Gonzalo) ,  duque  de  Ter- 
ranova ,  tomo  23 27 

Fernandez  de  H'avarrete  (D.  Eustaquio). — V.  Gar- 
cilaso  de  la  Vega ,  tomo  Í6 ,  pág.  9  y  siguientes. 

—  V.  Memoria  sobre  las  tentativas  hechas  y  premios  ofre- 
cidos en  España  al  que  resolviera  el  problema  de  la  lon- 
gitud en  la  mar.  Redactada  por  D.  Eustaquio  Fernandez 

de  Navarrete,  tomo  21 5 

—  V.  Raneo  (José) ,  tomo  23 27 

Fernandez  de  üíavarrete  (D.  Martin). —  Nota  bio- 
gráfica y  catálogo  de  sus  obras,  tomo  6.',  pág 5 

—  V.  Cano  (Juan  Sebastian  del). —  Su  biografía,  tomo  i.".    244 

—  V.  Cortés  (Hernán). — Noticia  bibliográfica  de  las  cinco 
relaciones  que  envió  á  S.  M.  de  sus  descubrimientos  y 
conquistas  en  Nueva  España,  tomo  1.",  pág 410 

Fernandez  de  Velaseo  (D.  Pedro).— V.  Nieva  (con- 
de de),  tomo  14,  pág.  424  y  siguientes. 

Fernando  (D.),  infante  de  España,  hermano  de  Car- 
los V. — Carta  que  escribió  á  D.  Alonso  de  Fonseca  ar- 
zobispo de  Toledo  desde  Ralisbona  á  13  de  julio  de  1532, 
pidiéndole  socorros  pecuniarios  para  los  gastos  de  la 
guerra  contra  el  turco  Solimán,  tomo  1.° 147 

—  Respuesta  que  le  dio  el  arzobispo  de  Toledo.— V.  Fon- 
seca  (ü.  Alonso  de),  tomo  1."  148 

—  Copia  del  testimonio  de  convenio  celebrado  entre  los  ve- 
cinos de  la  villa  de  Simancas  y  los  señores  de  la  chancille- 
ría  de  Valladolid,  sobre  la  entrega  y  conducción  á  dicha 
ciudad  del  infante  D.  Fernando  segundo-génito  del  señor 
rey  D.  Felipe  I,  para  guardarle  allí  hasta  nueva  dis- 


Av,.-  .^^T  Pátjiuas. 


posición  de  su  madre  la  señora  reina  düíia  Juana ,  to- 
mo 13 400 

Fernando  I,  emperador  de  Alemania.  Su  corresponden- 
cia con  Felipe  II  rey  de  España,  desde  marzo  de  iooG 
hasta  enero  de  I060,  tomo  2.° 419 

Fernando  V.— Carta  á  Gonzalo  Ruiz  Je  Figueroa  su 
embajador  eti  Yenecia ,  dándole  cuenta  de  todo  lo  que  le 
había  ocurrido  con  su  yerno  Felipe  I,  llamado  el  Her- 
moso ,  después  de  la  muerte  de  la  reina  Católica  doña 
Isabel ,  tomo  8.° 383 

—  "Treslado  de  la  carta  que  escribió  el  rey  de  Aragón  al 
tiempo  de  su  muerte  al  príncipe"  (Fernando  el  Católico 

á  Carlos  V.)  tomo  14 333 

—  Y.  Rey  Católico  (D.  Fernando  V).— Carta  á  la  ciudad  de 
Baeza,  etc.,  tomo  13 396 

—  V.  Isabel  (Reina  Católica  doña). — Documentos  relativos 
al  gobierno  de  estos  reinos ,  muerta  la  reina  Católica 
doña  Isabel  (entre  Fernando  Y,  etc.),  tomo  14,  pág.  285 
hasta  la 3S2 

Fernando  VI. — Y.  Piquer^D.  Andrés). — Discurso  so- 
bre la  enfermedad  del  rey  nuestro  señor  D.  Fernando  YI, 
escrita  por tomo  18 I06 

Ferrandes   de  Quiñones  (D.  Diego),  conde  de 

Luna. — Protesta  hecha  por en  la  villa  de  Laguna  á 

2"  de  noviembre  de  1470,  porque  llamado  por  Enri- 
que IV ,  temía  que  le  mandase  jurar  á  la  princesa  doña 
Juana ,  y  él  no  queria  quebrantar  el  juramento  que  te- 
nia prestado  á  la  princesa  doña  Isabel,  como  legítima 
heredera  á  la  corona  de  Castilla,  tomo  14 421 

Filabrés  (Sierra  de). —V.  Capitulaciones  entre  los  reyes 


46 

Páginas. 

Católicos  y  los  moros  de  Purchena ,  villas  y  lugares  del 
rio  de  Alraanzora ,  valle  de  Purchena  y  sierra  de  Fila- 
brés,  tomo8.° .     405 

Vilípiuas ,  lo  que  dispuso  la  reina  doña  María  Ana  de 
Austria ,  gobernadora  del  reino  en  la  menor  edad  de  su 
hijo  Carlos  II,  para  el  gobierno  de  las  iglesias  episcopa- 
les de en  sede  vacante,  tomo  2.° 294 

Flándes.— V.  Paises  Bajos.— (Documentos  relativos  á 
negocios  de  los),  tomo  4.*'  desde  la  pág.  278  hasta  la.  .     b6Q 

Floranes  (D.  Rafael). —  Vida  literaria  del  canciller  ma- 
yor de  Castilla  D.  Pedro  López  de  Avala ,  desde  la  pági- 
na 5  del  tomo  i 9  hasta  la  49  del  tomo  20. 

—  Origen  de  los  estudios  de  Castilla  ,  especialmente  los  de 
Valladolid,  Falencia  y  Salamanca,  en  que  se  vindica  su 
mayor  antigüedad ,  tomo  20 51 

—  Vida  y  obras  del  Dr.  D.  Lorenzo  Galindez  Carvajal, 
consejero  de  los  Reyes  Católicos ,  tomo  20 279 

—  Apuntamientos  curiosos  sobre  behetrías ,  so  condición, 
privilegios  y  modo  de  hacerse  en  ellas  las  filiaciones, 
tomo  20 407 

—  Notas  manuscritas  por  la  mayor  parte  genealógicas,  que 
puso  á  las  márgenes  de  un  ejemplar  de  la  Crónica  de  don 
Juan  II,  de  la  edición  de  Logroño  de  1517,  en  folio, 

Lope  Bravo  de  Rojas,  sevillano,  en  1555.  Las  transcri-  •'. 

be  de  su  mano  y  las  ilustra  con  aumento  de  otras  y  la 
vida  literaria  del  autor  D ,  tomo  20 503 

Florida  (La).  — V.  Santander  (el  Dr.  Pedro  de),  to- 
mo 26 o40 

Fonseca  (Alonso  de),  arzobispo  de  Toledo.— Respuesta 
que  dio  áD.  Fernando,  infante  de  España,  hermano  de 


Páginas. 

Carlos  Y,  desde  Alcalá  á  1."  de  agosto  de  1532,  sobre  ' 

socorros  pecuniarios  que  aquel  le  pedia  para  los  gastos 

de  la  guerra  contra  el  turco  Solimán,  tomo  4." i48 

Frias  (P.  Fr.  Lorenzo). — Breve  noticia  de  los  manuscri- 
tos de  la  biblioteca  de  la  santa  iglesia  de  Toledo,  tomo  9.°    566 

—  Su  biografía,  tomo 9." 566 

Faster  de  Rivera  (Fr.  Buenaventura). — Memorial  al 
rey  sobre  cosas  relativas  á  la  canonización  de  Santo  To- 
más de  Villanueva,  tomo  o.° 127*** 

—  Id.  relativo  al  mismo  asunto ,  tomo  o." J28 

—  Id.  sobre  el  mismo  asunto ,  tomo  5.° 131 

Galindez  Cari'ajal  (Dr.  D.  Lorenzo).— Anales  breves 
del  reinado  de  los  reyes  Católicos ,  D.  Fernando  y  doña 
Isabel ,  que  dejó  manuscritos  el  Dr.  D.  Lorenzo  Galindez 
Carvajal ,  y  una  continuación  de  la  Crónica  de  aquellos 
reyes,  que  hasta  ahora  no  se  ha  publicado,  tomo  18.   .    227 

—  Adiciones  genealógicas  á  los  claros  varones  de  Fernán 
Pérez  de  Guzman,  señor  de  Batres,  escritas  en  el  año 
de  1317,  después  del  mes  de  octubre,  como  de  ellas 

I   consta,  tomo  18 423 

—  Informe  que  dio  á  Carlos  V  sobre  los  que  componían  su 
Consejo  Real,  tomo  1.° 122 

—  V.  Floranes  (D.  Rafael).— Vida  y  obras  de  doctor  D.  Lo- 
renzo Galindez  Carvajal ,  tomo  20 279 

Oalons. — V.  Chalons,  tomo  23 86 

Oarellaso  de  la  Veg-a.— Su  vida  por  D.  Eustaquio 
Fernandez  di  Navarre te,  tomo  16 9 

—  Ilustraciones  y  documentos  relativos  á  la  misma  ,  to- 
mo 16 157 

Gasea  (el  licenciado  D.  Pedro  la). —Carta  enviada  desde 


Páginaif. 

el  Cuzco  á  la  ciudad  de  Sevilla  sobre  la  victoria  que  hubo 

el contra  Gonzalo  Pizarro  en  el  valle  de  Xaquixa- 

guana,  tomo  26 177 

—  V.  Pérez  de  Vergara  (Juan),  tomo  26 485 

—  V.  Relación  de  varios  sucesos  del  tiempo  de  los  Pizar- 

ros,  Al  magros,  la  Gasea  y  otros,  lomo  26 493 

—  V.  Instrucción  que  la  Majestad  del  rey  D.  Felipe  II  dio 
al  licenciado  Gasea  para  la  pacificación  de  los  reinos  del 
Perú ,  tomo  26 274 

Germana  (Doña),  segunda  muger  de  Fernando  V. — 
V.  Carlos  V.  —  Copia  del  registro  de  carta  del  príncipe 
D.  Carlos  (V)  á  la  reina  de  Aragón  Doña  Germana,  dándo- 
le el  pésame  por  la  muerte  de  su  marido,  etc.,  tomo  14.    55o 

—  Id.  Carta  á  la  misma  consolándola  en  su  aflicción,  etc., 
tomo  14 oo7 

Cfiron  (D.  Pedro),  duque  de  Osuna,  tomo  23 336 

Goleta  (toma  de  la)  en  1S35.— V.  Carlos  V,  tomo  1.*  .     134 

—  V.  Austria  (D.  Juan  de) ,  tomo  3.° 

Oonza^a  (D.  Fernando).— V.  Carlos  V,  tomo  1."  .   .   .     207 

González  Dávila  (Gil). — V.  Audiencia  de  Santo  Do- 
mingo, tomo  I.** 511 

Granada. — V.  Capitulaciones  (varias)  entre  los  Reyes 
Católicos  y  el  último  rey  de  Granada,  tomo  8,°,  desde         -j^ 
la  pág.  411  hasta  la 463 

—  Minuta  de  lo  tocante  al  asiento  que  se  dio  á  la  ciudad 
de  Granada  por  los  Reyes  Católicos  acerca  de  su  gobier- 
no, tomo  8.° 463 

—  Estado  de  la  población  de  varias  ciudades  y  villas  del 
reino  de  Granada  en  el  año  1493. — V.  una  carta  de  Fer- 
nando de  Zafra  á  los  Reyes  Católicos,  tomo  11.    .   .   .     561 


4S 

Páginas. 

—  V.  Reyes  Católicos.— "  Documentos  relativos  á  la  época 
de  sus  conquistas  en  Andalucía :"  donde  se  habla  en  va- 
rios de  ellos  de  esta  ciudad  y  de  su  reino ,  gobierno  etc. 

Grandes.— Y;  Confederación,  alianza  y  pleito  homena^ 
je  entre  varios  Grandes,  etc.,  tomo  8.° 350 

—  Memorial  que  dieron  los  Grandes  al  rey  (se  cree  que  era 
Juan  llj  para  que  no  hiciese  merced  de  las  fincas  de  su 
patrimonio,  tomo  i4. ;   .   .   .     566 

Granvela  (D.  Antonio,  cardenal  de).  — Dos  cartas  so-        *ii 
bre  el  nombramiento  del  duque  de  Medinasidonia  para 
capitán  general  de  Milán  y  ima  instrucción  de  Felipe  II 
para  el  gobierno  de  aquel  Estado,  tomó  2-i.  .....     531 

—  V.  Felipe  II,  tomo  4.» 

—  V.  Austria  (D.  Juan  de) ,  tomo  3.° 

Grájalba  (Juan  de).— V.  Velazquez  (Diego) ,  tomo  1."  .     o8o 

—  V.  Velazquez  de  Bazan  (D.  Antonio),  tomo  4.°    .   ,   .     232 

Onznian  el  Bueno  (D.  Alonso  de).— V.  Documentos 

relativos  á sétimo  duque  de  Medinasidonia,  tomo  28, 

desde  la  pág.  364  hasta  ia 424 

Oiiziuan  (D.  Enrique  de),  conde  de  Ohvares,  tomo  23.    267 

Onzman  (Gonzalo  de).— Y.  Velazquez  (Diego),  tomo  \  °    472 

Habana  (villa  de  la).— V.  Carta  de  creencia  de  la 

al  obispo  de  aquella  isla,  para  el  emperador  Carlos  V, 
tomo  26 55« 

Haro  (D  Gaspar  de),  marqués  del  Carpió,  lomo  23.  .  .     543 

Hernández  (Dr.  Francisco). —  Cartas  escritas  á  Feli- 
pe II  desde  la  ciudad  de  Méjico  por  los  años  de  1572  á 


Páginas. 


1576  sobre  la  historia  natural  de  Indias  que  escribió  por 
orden  de  S.  M.,  tomo  1." 362 

—  Carta  al  presidente  del  Consejo  de  Indias  D.  Juan  de 
Ovando  sobre  el  mismo  asunto,  tomo  1.° 376 

—  V.  Velazquez  de  Bazan  (D.  Antonio),  lomo  4.°.   .   .   .     232 

Hepos  (D.  Martin  de  los). — Historia  de  Pedro  Navarro, 
conde  de  Oliveto,  general  de  infantería,  marino  é  inge- 
niero, tomo  25 6 

Herrera  (Cristóbal  Pérez  de).  Carta  apologética  del  doc- 
tor  médico  de  S.  M.  y  del  reino  al  doctor  Luis  de  Va- 
lle ,  médico  de  cámara  del  rey  nuestro  señor  (Felipe  3.')  y 
su  protomédico ,  tomo  18 564 

Herrera  (Fernando  de). — V.  Relación  de  la  guerra  de 
Cipre  y  suceso  de  la  batalla  de  Lepante,  escrita  por 243 

HSdalg^os. — V.  Relación  de  los  vecinos  pecheros  que 
hay  en  las  diez  y  ocho  provincias  del  reino ,  etc, ,  y  de  los 
hidalgos  que  se  presupone  podrá  haber  en  cada  una  de 
lasdichasprovincias,  tomo  13 524 

Honras  que  se  celebraron  en  Madrid  por  S.  M.  la  reina 
de  Polonia  y  Suecia,  hermana  del  emperador  de  Austria 
Fernando  3,°,  en  las  Descalzas  Reales,  en  17  y  18de  ju- 
nio de  1644,  tomo  21 562 

Hoyo  (Pedro  de). — V.  Polanco  de  Santillana  (Nicolás). — 
Carta  al  ilustre  señor  Pedro  de  Hoyo ,  secretario  de  S.  M. 
y  de  su  Consejo,  sobre  la  jornada  del  Peñón,  año  1564, 
tomo  14 528 

Ibarra  (Francisco). — Carta  á  Felipe  II  enviándole  rela- 
ción de  toda  la  gente  que  iba  en  la  armada  de  S.  M., 
y  de  la  manera  como  se  hizo  su  embarcación  y  reparti- 


51 

Páginas. 

miento.  Faro  de  Mesina  46  de  setiembre  de  loTl,  tomo  3.*    203 

Indios  (Conversión  de).  —  V.  Isabel  (la  emperalri¿)f,''5^«-' 
mujer  de  Carlos  V,  tomo  2.° .   '379 

—  Los  excesos  cometidos  contra  ellos  y  su  remedio. — 

V.  Zuazo  (Licenciado  Alfonso  de),  tomo  2. • 347 

Infantado  (Duque  de).  —  V.  Felipe  II  >  tomo  3.' 

Inforniaelon  hecha  en  Panamá  á  44  de  diciembre  de 
4526  por  mandado  del  gobernador  de  Castilla  del  Oro, 
Pedro  de  los  Rios,  á  pedimento  del  espitan  Diego  de  Al- 
magro, para  informar  á  S.  M.  de  los  servicios  del  capitán 
Francisco  Pizarro  y  suyos,  y  pedir  mercedes,  tomo  26.     256 

—  Otra  sobre  el  mismo  asunto  hecha  á  pedimento  de  Diego 
de  Almagro  en  la  misma  ciudad  á  43  de  abril  de  4531. 
lomo  26 263 

Instrucción  de  lo  que  se  propuso  en  las  cortes  de  To- 
ledo el  año  de  4470  ,  tomo  45 ^Q6 

—  Id.  que  de  orden  del  rey  dio  el  virey  de  Méjico  (D.  An- 
tonio Sebastian  de  Toledo)  á  su  sucesor  en  22  de  octu- 
bre de  4673,  tomo  24  .... 438 

—  Id.  que  dio  Felipe  lí  á  los  del  Consejo  de  Italia  en  To- 
ledo á  o  de  diciembre  de  4oo9  ,  tomo  24 369 

—  Id.  que  la  Majestad  del  rey  D.  Felipe  II  dio  al  licen- 
ciado Gasea  para  la  pacificación  de  los  reinos  del  Perú, 
tomo  26 274 

—  Instrucción  y  advertimientos  que  el  virey  D.  Martin  En- 
riquez  dejó  al  conde  de  Coruña  (D.  Lorenzo  Suarez  de    -  '*- 
Mendoza) ,  su  sucesor  en  los  cargos  de  Nueva-España, 
tomo  26 373 

Isabel  (la  emperatriz),  muger  de  Carlos  V.  — Cartas  á 
D.  Alonso  de  Fonseca,  arzobispo  de  Toledo,  en  que  ade- 
más de  otras  cosas  tocantes  á  su  servicio  le  pedia  socoro 


52 

Páginas. 


ros  pecuniarios  para  los  gastos  de  la  guerra  contra  el 
gran  turco  Solimán  y  moros  de  África. 

—  Carta  fecha  en  Madrid  á  20  de  diciembre  de  1329,  to- 
mo 1." 140 

—  Id.  de  Medina  del  Campo  á  2o  de  febrero  de  4532 ,  to- 
mo 1.° 144 

—  Id.  de  Medina  del  Campo  á  24  de  marzo  de  1532 ,  to- 
mo 1.°. 145 

—  Id.  de  Medina  del  Campo  á  7  de  julio  de  1532,  tomo  I."    147 

—  Id.  de  Medina  del  Campo  á  5  de  agosto  de  1532,  tomo  1.°    149 

—  Id.  de  Segovia  á  27  de  setiembre  de  1532,  tomo  1.°.   .     150 

—  Carta  que  escribió  al  arzobispo  de  Toledo ,  pidiéndole  no- 
ticia de  los  eclesiásticos  de  virtud  y  buen  ejemplo  que  qui- 
siesen pasar  á  América  para  la  conversión  de  los  indios, 
tomo  2.°  . 379 

—  V.  Carlos  V,  tomo  3." 

Isabel  (Reina  Católica  doña).  —  Carta  á  los  oficiales  de 
la  contratación  de  Sevilla  i  en  que  se  habla  del  célebre 
Juan  de  la  Cosa,  tomo  13 496 

—  Documentos  relativos  al  gobierno  de  estos  reinos ,  muer- 
ta la  reina  Católica  doña  Isabel ,  entre  Fernando  Y ,  su 
hija  doña  Juana  y  el  marido  de  esta  Felipe  I,  tomo  14, 
pág.  285  hasta  la.  ... 352 

•lopdan  (D.  Lúeas).  —  Copia  legahzada  del  testamento 

de pintor  de  cámara  del  Sr.  D.  Carlos  II,  otorgado 

en  Ñapóles  á  31  de  diciembre  de  1704,  tomo  20.  .   .   .     563 

Juan  II. — Carta  original  del  señor  rey  D.  Pedro  II,  di- 
rigida á  Pedro  Fernandez  de  Córdoba ,  alguacil  mayor  de 
Segovia,  para  que  tuviese  á  buena  guarda  al  príncipe 
su  hijo  en  el  alcázar  de  aquella  ciudad ,  tomo  14.  .   .   .    568 

—  V.  Grandes. — Memorial  que  dieron  los  Grandes  al  rey 
(se  cree  que  era  Juan  11) ,  para  que  no  hiciese  mercedes 

de  las, fincas  de  su  patrimonio,  tomo  14 366 


53 

Páginas. 

Juana  (DoBa),  hija  de  los  Reyes  Católicos.  — Armada  y      ''  — 
provisiones  para  llevarla  á  Flándes  cuando  fué  á  casarse 
con  el  archiduque  D.  Felipe  I  en  1496,  tomo  8.°   .   .   .     S48  - 

—  V.  Isabel  ( Reina  Católica  doña). — Documentos  relativos 
al  gobierno  de  estos  reinos,  muerta  la  reina  Católica 
doña  Isabel ,  entre  Fernando  V ,  su  hija  doña  Juana  y  el 
marido  de  esta  Felipe  I,  tomo  44,  pág.  28o  hasta  la.  .     3o2 

Jaana  (Reina  doña),  mujer  de  Enrique  IV. — Testamen- 
to de  la escrito  por  ella  misma,  tomo  13 470  - 

•Ineccs ,  abogados  fiscales  y  secretarios  nombrados  para 
el  tribunal  de  Bruselas  á  o  de  diciembre  de  1567 ,  to- 
mo 4."  410 


k 


Lanoya  (Carlos) ,  tomo  2o 6o 

La  ValeUe. — V.  Facsímile  de  la  firma  del  gran  maes- 
tre de  Malta,  tomo  29 412 

E.eon  (maestro  Fr.  Luis  de). ^Proceso  original  que  formó 
contra  él  la  Inquisición  de  Yalladolid,  tomo  10  y  11 
basta  la oo8 


Lepante  (Batalla  de).— V.  Servia  (P.  Fr.  Miguel )-Re-    **f^-' 
lacion  de  los  sucesos  de  la  armada  de  la  Santa  Liga,  y 
entre  ellos  el  de  la  batalla  de  Lepanto,  etc.,  tomo  11.  .     3o9 

—  Relación  de  la octubre  de  1371 ,  tomo  o.° 216 

—  Id.  otra'^sacada  de  un  códice  del  Escorial  que  tiene  por 
titulo:  "Memorias  de  Fr.  Juan  de  San  Gerónimo,"  to- 
mo o.» 239 

—  Id.  otra  sacada  de  un  códice  de  la  Biblioteca  Real  de 
Madrid,  tomo 3.° 239 

—  Id.  otra  sacada  de  una  carta  que  el  limo,  senado  de  Ve- 
necia  escribió  á  su  embajador  que  reside  en  la  corte  de 

S.  M.  etc.,  tomo  o." 346 


54 

,?.t^^Vv\»iA  Páginas. 


—  Noticia  de  oirás  relaciones  sobre  el  mismo  asunto ,  to- 
mo 3.° , 269 

—  Relación  del  repartimiento  que  se  hizo  de  los  bajeles, 
artillería  y  esclavos  que  se  tomaron  de  los  turcos  en  la 
batalla  de  Lepanto  de  7  de  octubre  de  io71 ,  en  el  puer- 
to de  Santa  Maura  á  48  del  mismo  mes,  en  presencia  del 
Excmo.  Sr.  Marco  Antonio  Colona  general  de  Su  Santi^ 
dad,  y  de  los  diputados  de  S.  M.  y  señores  venecianos, 
tomo3t° .    227 

—  Y.  Agustín  (D.  Antonio),  tomo  3.°.  .,,.,,,.    270 

—  V.  Austria  (D.  Juan  de). 

—  V.  Felipe  2,° 

—  V.  Mármol  (Luis  del),  tomo  3.".  ...,..,,,   ,    270 

—  V.  Murillo  (Francisco  de),  tomo  3.°.   ........     224 

-^V.  Pedresa  (Frapcisco  de),  tomo  3.".  ..,..,.,    289 

Lezcano  (Juan  de). — Orden  que  habia  de  tener  en  el  pa- 
saje de  loa  moros  del  reino  de  Granada ,  que  quisieren 
pasar  allende,  tomo  11,   .,..,...,,.,   .     509 

LoaSsa  (Fr,  García  de) ,  cardenal  de  Osma.-r-Su  corres- 
pondencia con  Carlos  V  y  con  el  secretario  D.  Francis- 
co de  los  Cobos ,  tomo  14  desde  la  pág.  K  hasta  la.   ,   .     284 

I^ope  d<5  Vcg-a,' — Noticia  de  algunas  de  sus  comedias 
y  autos  originales ,  con  un  facsímile  de  su  firma,  to-^ 
mQl.%   ,.,,......., .   .    5721 

López  de  Jkyala  (D,  Pedro).— V.  Floranes  (P.  Rafael), 
tomo  19  y  20, 

I^opcz  Huptado  de  ilciidoza  (D,  liíigo),  marqués 
de  Mondejar,  tomo  23,.   ..,.,,..,..,.    239 

Luna  (conde  de).--V.  Ferrandes  de  Quiñones  (D.  Diego), 
tomo  14,, ,.,.,,.,,,..,.    421 


55 

Páginas. 


Machuca  (Fr.  Juan),  religioso  franciscano,  nombrado 
confesor  de  D.  Juan  de  Austria  por  Felipe  lí. — V.  Feli- 
pe II,  tomo  3.° 186 

Madrid  (ayuntamiento  de).— V.  Carlos  V,  tomo  2.°  .   .     306 

—  V.Toledo,  tomo  2." 307 

Madrid  (villa  de). — Documentos  relativos  á  la en 

tiempo  de  las  Comunidades ,  con  otros  sucesos  pertene- 
cientes á  hechos  sucedidos  antes  y  después ,  que  tienen 
conexión  con  la  misma  época,  tomo  2.° .     30o 

—  Instrucción  que  dio  á  los  procuradores  que  debían  asis- 
tir en  su  nombre  á  las  Cortes  de  la  CoruSa ,  celebradas 

en  lo20,  tomo  2.° 309 

Maldonado  (Francisco). — Su  sentencia  y  decapitación, 
tomo  1.° 283 

Maqueda  (duque  de),  virey  de  Valencia. — Carta  á  Car- 
los V  sobre  la  necesidad  de  proveer  de  un  buen  prela- 
do á  la  iglesia  de  Valencia  después  de  la  muerte  de 
Santo  Tomás  de  Villanueva ,  cuyas  virtudes  ensalza ,  to- 
mo 5.° 124 

María  (Dona),  infanta  de  Portugal. — Relación  del  reci- 
bimiento que  se  le  hizo  cuando  vino  á  España  á  despo- 
sarse con  Felipe  II  en  lo43,  tomo  3.» 361 

María  (Doña) ,  reina  de  Inglaterra. — Carta  á  Carlos  V, 
felicitándole  por  la  victoria  que  habia  alcanzado  Feli- 
pe II  en  la  jornada  de  San  Quintín,  tomo  3.° S37 

—  V.  Felipe  II. 

Mármol  (Luís  del). —  Relación  del  estandarte  que  se  to- 
mó á  los  turcos  en  la  batalla  naval  de  Lepanto,  tomo  3.°    270 

Martínez  (Benito).—  Memorial  que  presentó  á  S.  M.  en 


56 

Páíjinas. 

nombre  de  Diego  VolazquGz  contra  Hernán  Gortég ,  lo- 
mo 1.» ....................   .     407 

Martínez  Silíceo  (D.  Juan),  obispo  de  Cartagena  y 
después  arzobispo  de  Toledo. -rDe  él  se  habla  largamen- 
te en  la  relación  del  recibimiento  que  se  hizo  á  dolía  Ma- 
ría infanta  de  Portugal  cuando  vino  á  España  á  despo- 
sarse con  Felipe  II.-— V.  María  (Doña),  infanta  de  Portu- 
gal, etc,  tomo  3.^  ,..,..,..,.....  .    361 

illediiia  del  Casnpa, -— Relación  de  la  antigüedad  y 

sitio  de y  sus  ferias ,  y  de  la  contratación  de  ellas ,  y 

del  estado  que  tienen  hasta  hoy  18  de  octubre  de  1606, 
tomo  17  ....................     541 

lllcdlna  de  las  Torres  (duque  de) ,  tomo  :25.  .   .   .     ^21 

UlcdSnasSdonía  (Duque  de).— V.  Escritura  de  confe- 
deración, otorgada  en  19  de  febrero  de  1475  ante  el  cro- 
nista Alonso  de  Palencia,  en  que  D.  Enrique  de  Guzman... 
reconoce  y  jura  á  D.  Fernando  y  dolía  Isabel  por  herede- 
ros de  los  reinos  de  Castilla  y  León,  etc.,  tomo  21  .   .     S53 

—  V.  Granvcla  (D.  Antonio,  cardenal  de). — Dos  cartas 
sobre  el  nombramiento  del  duque  de  Medinasidonia  para 
capitán  general  de  Milán  y  una  instrucción  de  Felipe  II 
para  el  gobierno  de  aquel  estado,  tomo  24.    ....   .     551 

—r  V.  Correspondencia  de  Felipe  II  con  el  duque  de  Medi- 
nasidonia sobre  su  derecho  á  la  corona  de  Portugal ,  y 
ocupación  de  este  reino  después  de  la  muerte  del  cardenal 
p.  Enrique ,  tomo  27,  desde  la  pág.  210  hasta  la  .   .   .     398 

memoria  sobre  las  tentativas  hechas  y  premios  ofreci- 
dos en  España  al  que  resolviera  el  problema  de  la  longi- 
tud en  la  mar-  Redactada  por  D.  Eustaquio  Fernandez  de 
Navarrctc ,  tomo  21 r   •   •   •        ^■ 

Aleiidivil  (Miguel  de).T'Caita  á  S.  M.  sobro  la  entrada 


57 

Pdfjhias. 

del  duque  de  Alba  en  Bruselas,  con  otros  sucesos  coe-? 
táüeos  importantes.  Bruselas  29  de  agosto  de  io61,  to- 
mo 4.°. 397 

—  Carta  al  mismo  en  que  da  cuenta  de  lo  que  habla  pasa- 
do entre  el  duque  de  Alba  y  la  gobernadora  de  Flándes. 
Bruselas  10  de  setiembre  de  io67,  tomo  4.° 421 

Mendoza  (D.  Antonio  de).  — Carta  de virey  de  Mé- 
jico á  S.  M.  Méjico  20  de  junio  de  1544 ,  tomo  26  .    .     523 

—  Parte  ó  capítulo  de  instrucción  que  dio  D.  Antonio  de 
Mendoza  á  un  sugeto  que  enviaba  á  S.  M.  sobre  las  co- 
sas de  Indias ,  tomo  26 328 

—  V.  Relación ,  apuntamientos  y  avisos  que  por  mandado 
de  S.  M.  di  al  Sr.  D.  Luis  de  Velasco,  visorey ,  goberna- 
dor y  capitán  general  desta  Nueva-Espana,  tomo  26. .   .     284 

Mendoza  (D.  Francisco  de) ,  cardenal  y  arzobispo  de  Bur- 
gos.—Carta  á  Felipe  II,  (sin  fecha)  sobre  el  casamiento 
del  rey  con  doiía  Isabel  de  Valois ,  tomo  3." 419 

—  Id.  al  príncipe  de  Eboli  sobre  el  mismo  asunto.  Burgos 

17  de  agosto  de  loo9,  tomo  3.** 421 

—  Id.  á  id.  sobre  el  mismo  asunto.  Nájera  6  de  diciembre 

de  loo9,  tomo  3.° 426 

—  Id.  á  D.  Francisco  de  Eraso  sobre  el  mismo  asunto.  Ná- 
jera 6  de  diciembre  de  loo9,  tomo  3." 427 

—  Y.  Felipe  II.  — V.  Eboli  (Príncipe  de),  tomo  o.", 

Mendoza  (D.  García  de).— Carta  á  Felipe  II,  avisándo- 
le la  sujeción  de  Arauco.  Cañete  de  la  Frontera  10  de 
enero  de  loo8,  tomo  26 217 

Mendoza  y  Luna  (D.  Juan  de).— Montes  Claros  (mar- 
qués de),  tomo  26 1(32 

Mereado  (Francisco).— Su  sentencia,  tomo  1.'.   ...     298 
Mogrovejo  (Santo  Toribio  de).— Carta  á  Felipe  II,  en- 


9a 

Páginas. 

viándole  las  acias  de  un  concilio  que  había  celebrado  en 

la  ciudad  de  los  Reyes,  ano  1591 ,  tomo  5.° 185 

Moneada  (D.  Hugo  de),  tomo  2o 77 

—  Facsímile  de  su  firma ,  tomo  24 ,  122 

—  Correspondencia  de y  otros  personajes  con  el  Rey 

Católico  y  el  emperador  Carlos  V,  tomo  24 77 

—  V.  Baeza  (Gaspar  de),  vida  del  famoso  caballero  D.  Hugo 

de  Moneada,  tomo  24 13 

Montcjo  (Francisco). — Declaración  que  este  y  Alonso 
Hernández  Portocarrero  dieron  en  la  Coruña  en  29  de 
abril  de  1520  sobre  la  armada  que  hizo  Diego  Velazquez 
para  el  descubrimiento  de  Nueva  España,  y  nombra- 
miento de  Hernán  Cortés  para  capitán  general  de  ella, 
lomo  1.» 486 

llontes  Claros  (Marqués  de). — Advertimientos  sobre 
algunos  puntos  del  gobierno  de  la  Nueva  España  que 

el envió  á  S.  M.  cuando  dejó  el  ser  virey  de  aquel 

reino.  Acapulco  2  de  agosto  de  1607,  tomo  26.  .   .   .     162 

Alontíg-ny. —  Documentos  relativos  á  su  prisión  y  muer- 
te,  tomo  4.",  desde  la  pág.  526  hasta  la 566 

—  Real  cédula  para  que  el  conde  de  Chinchón  tenga  preso 
en  los  alcázares  de  Segovia  á  Montigny.  Escorial  21  de 
setiembre  de  1567 ,  tomo  4.° 526 

—  Traslado  de  la  carta  en  francés  que  fué  tomada  dentro 
del  pan  que  se  daba  á  comer  á  Montigny.  Segovia  14  de 
julio  de  1568,  tomo  4." 527 

—  Carta  del  duque  de  Alba  á  Felipe  II ,  enviándole  las  sen- 
tencias de  Verghes  y  Montigny.  Bruselas  18  de  marzo  de 
1570,  tomo  4." 533 

—  Id.  requisitoria  del  duque  de  Alba  para  que  las  justicias 
del  reino  de  Castilla  ejecuten  la  sentencia  por  él  pronun- 
ciada contra  Montigny.  Bruselas  18  de  marzo  de  1570, 

tomo  4.° ^54' 


m 

Páginas. 

—  Minuta  de  carta  de  Felipe  II  al  duque  de  Alba  en  que 
dice  S.  M.  haber  recibido  copia  de  la  sentencia  contra  el 
marqués  de  Yerghes,  y  la  requisitoria  contra  Montigny: 
alaba  el  recato  con  que  ha  procedido  el  duque,  y  le  recO" 
mienda  el  secreto  hasta  que  avise  otra  cosa.  Escorial  úl- 
timo de  junio  de  4570,  tomo  4.° 538 

—  Real  cédula  para  que  D.  Eugenio  de  Peralta  vaya  á  Se-» 
govia  Y  tome  á  Montigny,  y  le  lleve  y  tenga  preso  en  la 
fortaleza  de  Simancas  con  ocho  hombres  de  guarda,  has- 
ta que  S.  M.  mande  otra  cosa.  Madrid  17  de  agosto  de 
1570,  tomo  4.». 539 

—  Id.  para  que  D.  Eugenio  de  Peralta  entregue  la  persona 
de  Montigny,  que  tiene  á  su  cargo  en  Simancas ,  á  don 
Alonso  de  Arellano  para  que  este  haga  de  él  lo  que  lleva 
entendido.  Escorial  !••  de  octubre  de  1570,  tomo  4.".   .     541 

—  La  orden  que  el  licenciado  D.  Alonso  de  Arellano ,  alcal- 
de de  la  audiencia  y  chancillería  de  Valladolid ,  ha  de  te- 
ner y  conviene  que  guarde  en  el  cumplimiento  y  ejecu^ 
cucion  de  lo  que  S.  M.  le  ha  cometido  en  el  negocio  de 
Montigny,  tomo  4." 542 

—  Carta  del  D.  Eugenio  de  Peralta  á  Felipe  II  dando  cuen- 
ta de  haber  encerrado  á  Montigny  en  el  Cubo  del  Obispo 

de  la  fortaleza  de  Simancas  por  haber  tratado  de  huirse.  ^^ 

Simancas  10  de  octubre  de  1570 ,  tomo  4.° 550 

—  Copia  del  escrito  en  latin  que  se  halló  cerca  del  aposen- 
to de  Montigny ,  tomo  4.° 5Si 

-—  Notificación  de  la  sentencia  de  muerte  á  Montigny,  to-         *  ' 
mo4.° "...     552 

—  Protestación  de  la  fé  que  hizo  Montigny  al  tiempo  de 

su  muerte ,  tomo  4." 553 

—  Carta  de  Fr.  Hernando  del  Castillo  al  doctor  Velasco  del 
Consejo  de  S.  M.  sobre  los  últimos  momentos  de  Mon- 
tigny ,  tomo  4.° 554 

—  Id.  de  D.  Eugenio  de  Peralta  á  Felipe  II  en  que  dice 
que  Montigny  habia  muerto  de  resultas  de  la  enfermedad 


60 

Páginas. 

que  le  habia  sobrevenido  en  la  cárcel.  Simancas  17  de 
octubre  de  1570 ,  tomo  4.° 559 

—  Relación  de  la  muerte  de  Montiguy  que  se  envió  al  du- 
que de  Alba,  á  2  de  noviembre  de  1570 ,  tomo  A.°.  .   .    560 

—  Minuta  de  carta  de  Felipe  II  al  duque  de  Alba  en  que 
le  encarga  difundiese  por  los  Estados  de  Flándes  la  es- 
pecie de  que  Montjgny  habia  fallecido  de  muerte  natu- 
ral. Escorial  o  de  noviembre  de  1570,  tomo  4.°.   .   .   .     565 

—  Carta  de  Felipe  II  á  su  hermana  Margarita,  gobernadora 

de  Flándes,  tomo  4." 284 

—  Id.  del  duque  de  Alba  á  Felipe  II,  tomo  4,° 444 

—  Id.  á  id. ,  tomo  4." 466 

—  Id.  á  id, ,  lomo  4.«' , 470 

—  Traslado  autorizado  de  la  requisitoria ,  y  también  de  los 
actos  y  confesiones  del  mismo  en  el  alcázar  de  Segovia, 

año  de  1569,  tomo  5.° 5 

—  V.  Carta  de  Felipe  II  al  cardenal  Granvela,  tomo  4.°,   .     337 

—  V.  Relación  de  los  papeles  que  se  enviaron  al  duque  de 
Alba,  tomo  4.° , >.   ,   .    477 

— V.  Carlos  V.— Testimonio  de  una  cédula  del  emperador 
Carlos  V.  etc.,  tomo  13, ,,,,,...     569 

Morales  (Ambrosio  de). — ^Prisión  del  arzobispo  de  Tole- 
do D.  Fray  Rartolomé  de  Carranza ,  escrita  de  orden  de 
Felipe  II  para  poner  en  la  librería  del  Escorial ,  tomo  5."    465 

Morales  de  Torres  (Juan) ,  pagador  del  armada  de 
S.  M. — Relación  del  dinero  que  recibió  para  la  paga  y 
gastos  de  la  dicha  armada  desde  15  de  junio  de  1571 
hasta  último  de  enero  de  1572,  tomo  3," 197 

Moreno  (Bachiller  Pedro).— V,  Audiencia  de  Santo  Do- 
mingo, tomo  1.** 511 

Moriscos  del  reino  de  Valencia.— Noticias  curiosas  so- 


fil 

Páginas. 

bre  su  estado  civil,  número  y  conversión.— V.  Villanue- 
va  (Santo  Tomás  de).— Copia  literal  de  varias  cartas  su- 
yas originales,  etc.,  tomo  o.",  desde  la  pág.  74  hasta  la.    437 

Morara  (D.  Cristóbal).  Noticia  biográfica,  tomo  6."   .   .       23 

—  Sus  cartas  á  Felipe  II. — V.  Felipe  IL — Correspondencia 
con  varias  personas,  etc.,  tomo  6.°,  desde  la  página  25 
hasta  la 666 

llurela  (ciudad  de). — Carta  que  escribió  al  gobernador 
del  reino  y  al  Consejo  Real  en  ausencia  de  Carlos  V  acer- 
ca de  las  Comunidades  de  Castilla,  acompañando  el  tras- 
lado de  una  carta  enviada  á  dicha  ciudad  por  el  ayunta- 
miento de  Toledo,  y  de  otra  que  el  ayuntamiento  de  To- 
ledo habia  recibido  del  de  Burgos,  tomo  S.** 318 

AInríllo  (Francisco  de). — Carta  al  secretario  Antonio  Pé- 
rez dándole  cuenta  de  la  victoria  de  Lepanlo.  9  de  octu- 
bre de  4o71,  tomo  3.°  - 224 

Hápoles. — V.  (Alonso  Y). — Varias  noticias  sobre  la  se- 
gunda expedición  á  Ñapóles  en  1452,  tomo  13.    .   .   .     477 

IVapvaez  (Panfilo  de). — Relación  de  los  conquistadores  y 
descubridores  que  fueron  con  él  á  Nueva  España,  to- 
mo 1." 527 

—  V.  Velazquez  (Diego) ,  tomo  1.' 472 

—  V.  Audiencia  de  Santo  Domingo,  tomo  1." 49o 

—  V.  Velazquez  de  Razan  (D.  Antonio) ,  tomo  4.* .   .   .   .  232 

Mavapra  (conquista  de),  por  el  Rey  Católico.  — V.  Pa- 
dilla (Lorenzo  de).  Crónica  de  Felipe  I  llamado  el  Her- 
moso, tomo  8." 499 

H'avappete  (D.  Martin  Fernandez  de). —  V.  Fernandez 
de  Navarrete  (D.  Martin) 


62 

Págijias. 


Ifavarrete  (D.  Eustaquio  Fernandez  de)— Examen  his- 
tórico-crítico  de  los  viajes  y  descubrimientos  apócrifos 
del  capitán  Lorenzo  Ferrer  Maldonado ,  de  Juan  de  Fuca 
y  del  almirante  Bartolomé  de  Fonte.  Memoria  comenzada 
por  D.  Martin  Fernandez  de  Navarrete  y  arreglada  y  con- 
cluida por  D.  Eustaquio  Fernandez  de  Navarrete,  to- 
mo 45 5 

—  V.  Fernandez  de  Navarrete  (D.  Eustaquio). 

IVavarro  (conde  Pedro).  Sucesos  de  las  armadas,  así  es-         «» 
pañolas  como  turquescas ,  con  la  noticia  de  como  el  con- 
de Pedro  Navarro  construyó  el  año  de  1512  una  fortale- 
za en  el  Penon  de  Velez  de  la  Gomera ,  tomo  13.  .   .  .     503 

—  Su  retrato  y  facsímile  de  su  firma,  tomo  25 10 

—  Dibujo  de  su  sepulcro ,  que  está  en  el  convento  de  Santa 
María  la  Nova  de  Ñapóles ,  tomo  25 400 

—  Facsímile  de  una  carta  suya  autógrafa ,  tomo  25 .    .   .    405 

—  V.  Heros  (D.  Martin  de  los). — Historia  de conde  de 

Oliveto,  general  de  la  infantería,  marino  é  ingeniero, 
tomo  25 5 

—  Documentos  relativos  á  dicha  historia,  tomo  25.  .   .   .     405 

nieva  (conde  de). —  Carta  original  del  conde  de  Nieva  di- 
rigida, al  parecer,  á  D.  Pedro  Fernandez  de  Velasco, 
cuarto  condestable  de  Castilla,  y  tercer  duque  de  Frias, 
tomo  14 424 

—  Otra  carta  original  al  mismo  condestable  de  Castilla, 
tomo  14 450 

Ilota  de  los  nombramientos  hechos  en  Madrid  á  12  de 
marzo  de  1567,  de  contadores,  pagadores,  etc.,  del  ejér- 
cito de  Flándes ,  tomo  4.° 381 

ütoticla  del  viaje  literario  á  las  iglesias  de  España ,  em- 
prendido de  orden  del  rey  en  el  año  1802.  Escrita  en 
1814.  La  publica  un  amigo  del  autor,  tomo  21 383 


rág\na$. 
Moya  (Carlos  déla). —  V.  Lanoya  (Carlos),  tomo  23.      63 

Olli-apes  (doctor). — Relaciwi  de  la  enfermedad  del  prín- 
cipe D.  Carlos  en  Alcalá  por  el médico  de  su  cáma- 
ra, tomo  IS 5o3 

Orang-e  (príncipe  de). — Carta  á  la  duquesa  de  Parma  en 
que  dice  que  ha  recibido  un  Breve  del  Papa ,  y  hace  re- 
lación de  las  alteraciones  sucedidas  en  sus  estados  por 
causa  de  religión.  Bruselas  i2  de  diciembre  de  iS63, 
tomo  4." 289 

—  Carta  á  Su  Santidad  en  que  expone  la  conducta  que  ha- 
bía observado  en  las  turbaciones  de  sus  estados  de  Oran- 
ge  ,  providencias  que  habia  tomado  contra  los  hugono- 
tes, y  su  adhesión  á  la  religión  católica  y  á  la  Santa  Sede. 
Bruselas  17  de  diciembre  de  4563,  tomo  4.° 294 

—  De  la  forma  del  proceso  y  algunas  principales  causas 
por  las  cuales  Guillermo  de  Nassao,  príncipe  de  Orange, 

fué  condenado,  tomo  4.° 428 

Osuna  (duque  de).  —  Sus  cartas  á  Felipe  2.** 

—  V.  Felipe  II.  Correspondencia  con  varias  personas,  etc., 
tomo  6.°  desde  la  pág.  23  hasta  la 666 

Pacheco  (doña  María  de) ,  muger  de  Juan  de  Padilla. — 
Confiscación  de  sus  bienes  (en  las  notas) .  tomo  4."  .   .    286 

—  Noticias  sobre  su  estancia  en  Portugal  (en  las  notas), 
tomo  4.° 287 

Pacheco  (D.  Pedro),  cardenal  seguntino,  tomo 23.  .   .     440 

Padilla  (D.  Juan  de). —Su  nombramiento  de  capitán  ge- 
neral de  gente  de  armas  (en  las  notas),  tomo  4.»  .   .   .  284 

—  Su  sentencia  y  decapitación,  tomo  4.° 283 

—  Confiscación  de  sus  bienes  (en  las  notas),  tomo  4.»  .   .  286 


Páginas. 

Padilla  (D.  Lorenzo  de).  -^Crónica  de  Felipe  I ,  llamado 
ci Hermoso,  tomo  8.",  desde  la pág.  5  hasta  la  ....     267 

Én  esta  Crónica  se  tratan  muchos  sucesos  del  reinado  de  los 
ReyeÉ  CaiólicoSi 

Países  Bajos. — (Documentos  relativos  á  negocios  de 

los),  tomo  4.°,  desde  la  pág.  278  hasta  la.   ,   .   .    .   .     566 
—  V.  Carlos  V,  tomo  7.°.   .............     524 

Pai*i*a  (Doctor).  —  Carta  escrita  desde  Valladotid  al  Rey 
CatóUco ,  dándole  noticia  de  la  enfermedad  y  muerte  de 
Felipe  I ,  acaecida  en  Btirgos  el  2o  de  setiembre  de  1506, 
tomo  8.° 394 

Pascual  (D.),  cardenal  de  Aragón,  tomo  23.   ....    530 

Pavía  (Batalla de),  tomo  9.°  .   ...........     406 

Pazos  (D.  Antonio  de),  presidente  de  Castilla. — V.  To- 
ledo (D.  Fadrique  de)  hijo  del  duque  de  Alba. —  Causas 
que  dieron  motivo  á  su  prisión  y  á  la  de  su  padre ,  to- 
mo 7.° '. 464 

—  V.  Documentos  (nuevos)  sobre  las  causas  que  dieron 
motivo  á  la  prisión  de  D.  Fadrique  hijo  del  duque  de  Al- 
ba, y  también  á  la  del  mismo  duque.  Donde  hay  sobre 
este  asunto  una  larga  correspondencia  entre  D.  Antonio 
de  Pazos  y  Felipe  II,  tomo  8.° 483 

Pecheros. — V.  Relación  de  los  vecinos  pecheros  que 
hay  en  las  diez  y  ocho  provincias  del  reino ,  etc.,  tomo  13.    521 

Pedrarias  Dávilar — V.  Audiencia  de  Santo  Domin- 
go, tomo  1.° 511 

Pedrosa  (Francisco  de).  Memorial  ú  Felipe  II  pidiéndole 


65 

.nww»H  Páginas. 

que  mandase  imprimir  un  poema  latino  que  habia  com- 
puesto en  loor  de  la  victoria  de  Lepante,  intitulado  Aus- 
triaca ,  tomo  o. ° 289 

Peñaranda  (conde  de) ,  tomo  23 529 

Peñón  de  la  Gomera.  —  V.  Escobar  (Francisco  de). 
— ^Discurso  de  la  jornada  que  se  ha  hecho  con  las  gale- 
ras que  adelante  se  expresarán  en  este  año  de  i  564  por 
mandado  de  la  Majestad  del  Rey  de  España  D.  Feli- '♦•^^^ 
pe  II,  etc.,  tomo  14 504 

—V.  Polanco  de  Santillana  (Nicolás). —  Carta  al  ilustre  se- 
ñor Pedro  de  Hoyo,  secretario  de  S.  M.  y  de  su  Consejo, 
sobre  la  jornada  del  Peñón,  año  de  1564,  tomo  14.  .   .     528 

PerejB  (Antonio). — Su  prisión,  tomo  1." 95 

—  Documentos  relativos  á secretario  que  fué  de  Feli- 
pe II ,  tomo  12 ,  desde  la  pág.  5  hasta  la 574 

—  Fragmento  de  un  impreso  que  se  halla  en  el  archivo  de 
Simancas  sobre  Antonio  Pérez ,  tomo  13 365 

—  Su  legitimación  como  hijo  natural  de  Gonzalo  Pérez, 
concedida  por  el  emperador  Carlos  V ,  tomo  13.    .   ,   .     389 

—  Extractos  de  los  documentos  originales  sobre  Antonio 
Pérez  de  que  se  compone  un  legajo  que  vino  á  poder  del 
comisario  de  cruzada  D.  Manuel  Fernandez  Várela,  to- 
mo 15 397 

—  V.  Murillo  (Francisco  de) ,  tomo  o.** 224 

Pérez  (Gonzalo). — V.  Arteaga  (Esteban  de y  López, 

jesuita).  Breve  noticia  de  Gonzalo  Pérez,  tomo  13.   .   .     531 

Pere*  de  "Verg-ara  (Juan). — Relación  de  la  victoria 
que  hubo  el  licenciado  la  Gasea  contra  Gonzalo  Pizarro, 
tomo  26 183 

Perinot  (Antonio),  cardenal  de  Granvela,  tomo  23  .  .    227 

5 


66 

Páginas. 

Pcpií. — Copia  de  carta donde  se  trata  el  verdadero 

y  legítimo  dominio  de  los  reyes  de  España  sobre  el  Perú, 
y  se  impugna  la  opinión  del  padre  fray  Bartolomé  de  las 
Casas ,  tomo  13 425 

—  V.  Pizarro  (Francisco). — V.  Pizarro  (Pedro),  tomo  S.°. 

Plmentel  de  Herpepa  (D.  Juan  Alonso),  conde  de 
Benavente ,  tomo  23 289 

Plmentel  (D.  Pedro).  —  Su  prisión,  tomo  1.»  .   .   .   .     S44 

—  Su  sentencia ,  tomo  1 ." 294 

—  Su  decapitación ,  tomo  í° 556 

Pío  V. — Breve  de enviado  al  duque  de  Alba ,  en  que 

S.  S.  le  exhortaba  á  introducir  de  nuevo  la  religión  ca- 
tólica en  Inglaterra ,  y  dar  la  libertad  y  restituir  su  reino         < f 
á  María  Estuarda.  Roma  3  de  noviembre  de  1569 ,  to- 
mo 4." 514 

PIqíier  (D.  Andrés). — Discurso  sobre  la  enfermedad  del 
rey  nuestro  señor  D.  Fernando  6.°,  escrito  por ,  to- 
mo 18  156 

Pizappo  (D.  Francisco).  —  V.  Relación  de  varios  sucesos 
del  tiempo  de  los  Pizarros,  Almagres ,  la  Gasea  y  otros, 
tomo  26 .   .     193 

—  Acto  de  la  fundación  del  Cuzco,  hecha  por  Pizarro, 
tomo  26 221 

—  V.  Ruiz  Naharro  (el  P.  Fr.  Pedro).  Relación  de  los  he- 
chos de  los  españoles  en  el  Perú  desde  su  descubrimiento 
hasta  la  muerte  del  marqués  Francisco  Pizarro ,  tomo  26 .     232 

—  V.  Información  hecha  en  Panamá  á  14  de  diciembre  de  i 
1526  por  mandado  del  gobernador  de  Castilla  del  Oro, 
Pedro  de  los  Rios ,  á  pedimento  del  capitán  Diego  de  Al- 
magro, para  informar  á  S.  M.  de  los  servicios  del  capitán 
Francisco  Pizarro  y  suyos ,  y  pedir  mercedes,  tomo  26  .    256.V 


67 

Páginas. 

PSzarro  (Francisco),  relación  de  sus  primeros  descubri- 
mientos y  de  los  de  Diego  Almagro ,  tomo  5." 193 

Pizarpo  (D.  Gonzalo).— V.  Gasea  (el  licenciado  don 
Pedro  la)  >^oH 

—  V.  Pérez  de  Vergara  (Juan) ,  tomo  26 18S 

—  V.  Relación  de  varios  sucesos  del  tiempo  de  los  Pizarros, 
Almagros ,  la  Gasea  y  otros ,  tomo  26 495 

Pizapro  (D.  Juan).— V.  Relación  de  varios  sucesos  del  ' 

tiempo  de  los  Pizarros ,  Almagros  ,  la  Gasea  y  otros, 
tomo  26 195 

Pizarpo  (Pedro).— Relación  del  descubrimiento  y  con- 
quista de  los  reinos  del  Perú ,  tomo  5.» 201  > 

Podepes  que  dieron  las  principales  ciudades  á  los  dipu- 
tados que  asistieron  á  las  Cortes  de  Madrid,  celebradas  :^ 
por  el  señor  rey  D.  Carlos  IV  en  1789,  tomo  17.  .   .   .     455 

Polanco  de  Santillana  (Nicolás).— Carta  al  ilustre 
señor  Pedro  de  Hoyo ,  secretario  de  S.  M.  y  de  su  Con- 
sejo, sobre  la  jornada  del  Peñón,  año  de  1564,  tomo  14.    528 

máo^  mm^oiq  Ijkííí 

Ponce  de  León  (D.  Rodrigo),  duque  de  Arcos,  to- 
mo 2o 524 

Poptocappepo  (Alonso  Hernández).  —  V.  Montejo 
(Francisco),  tomo  1.° 486 

Poptugfal  (Conquista  de)  por  Felipe  H.— V.  San  Geróni-       *** 
mo  (Fr.  Juan  de).  Sus  memorias  ,  tomo  7.»  pág.  276  y       ^ 
siguientes. 

—V.  Medinasidonia  (duque  de).—  Correspondencia  de  Fe- 
lipe II  con  el  duque  de  Medinasidonia  sobre  su  derecho 
á  la  corona  de  Portugal ,  y  ocupación  de  este  reino  des- 


G8 

Páginas. 

pues  de  la  muerte  del  cardenal  D.  Enrique,  lomo  27,í«j(íía¿«í 

desde  la  página  210  hasta  la 398 

—  Id.  tomo  7."  pág.  338  y  siguientes. 

Potosí  (Cerro  del).— V.  Sierra  (D.  Lamberto  de),  tomo  5.*    170 

PnertadelSol.— Su  origen. — Véanse  las  notas  del 
tomo  2.» 30G 

Purcheiía.— V.  Capitulaciones  entre  los  Reyes  Católi- 
cos y  los  moros  de  Purchena ,  villas  y  lugares  del  rio  de 
Almanzora,  valle  de  Purchena  y  sierra  de  Filabres,  to- 
mo 8.° 103 

Quiñones. — V.  Ferrandes  de  Quiñones  (D.  Diego), 
tomo  14 421 

Raneo  (José). — Libro  donde  se  trata  de  los  vireyes  y  lu- 
gartenientes del  reino  de  Ñapóles  y  de  las  cosas  tocan- 
tes á  su  grandeza,  compilado  por auo  mdcxxxiv,  é 

ilustrado  con  notas  por  D.  Eustaquio  Fernandez  de  Na- 
varrete ,  tomo  23 27 

Real  provisión  sobre  montes  y  plantíos,  dada  por  la  rei- 
na doña  Juana  y  su  hijo  D.  Carlos,  en  Yalladolid  á  22 
de  diciembre  de  1518,  tomo  20 552 

Reclamaeion  de  la  ciudad  de  Méjico  contra  las  nue- 
vas provisiones ,  tomo  26 332 

Reformación  de  órdenes  religiosas.  —  V.  Felipe  II, 
tomo  7." 529 

Relación  de  un  renegado  sobre  la  armada  del  turco  (la 

que  combatió  en  Lepanto) ,  tomo  3." 191 

— •  Id.  de  los  papeles  que  se  enviaron  al  duque  de  Alba,  de 


69 

Páginas. 


Montigny ,  de  Simón  Renard  y  de  otros.  Madrid  18  de 
octubre  de  io67,  tomo  4.** 477 

—  Relación  de  los  vecinos  pecheros  que  hay  en  las  diez  y 
ocho  provincias  del  reino,  según  la  averiguación  que  se 
hizo  para  el  repartimiento  del  servicio  del  año  de  quinien- 
tos cuarentay  uno,  y  de  los  hidalgos  que  se  presupone  po- 
drá haber  en  cada  una  de  las  dichas  provincias ,  tomo  13.    521 

—  Id.  de  la  guerra  de  Cipre  y  suceso  de  la  batalla  de  Le- 
panto,  escrita  por  Fernando  de  Herrera,  tomo  21.   .   .     243 

—  Id.  de  varios  sucesos  del  tiempo  de  los  Pizarros,  Alma- 
gros ,  la  Gasea  y  otros ,  tomo  26 193 

—  Id.  que  los  alcaldes  é  regidores  de  la  villa  de  la  Veracniz 
escriben  á  S.  M.,  é  de  lo  que  ha  pasado  en  su  viaje  é  po- 
blación (6  de  julio  de  1319),  tomo  4.° 5 

—  Id.  de  las  minas  de  Veragua,  su  tierra ,  distrito  y  po- 
blación ,  tomo  26 363 

—  Relación ,  apimtamientos  y  avisos  que  por  mandado  de 
S.  M.  di  al  Sr.  D.  Luis  de  Velasco,  visorey,  y  gober- 
nador y  capitán  general  desta  Nueva  España ,  tomo  26.   .     284 

Rentas  reales. — Breve  resumen  de  ellas:  época  y  mo- 
tivos de  su  concesión  y  establecimiento.  Por  D.  Tomás 
González ,  tomo  2.°   .   .   .  •. 296 

Recfuesens  (D.  Luis  de).  — V.  Toledo  (D.  García  de),  ® 

tomo  3.** 

Resolnciones  sobre  negocios  de  parte ,  así  hombres 
como  poblaciones ,  y  alguno  general ,  tomo  26 204  ' 

Rey  CaióHeo  (D.  Fernando  V). — Carta  á  la  ciudad  de 
Baeza ,  haciéndole  saber  la  victoria  conseguida  en  la  ba- 
talla de  Toro ,  tomo  13 396 

Reyes  Católieos. — Instrucción  que  dieron  los  Reyes    ^**W 
Católicos  al  obispo  de  Tuy,  y  ai  abad  de  Sahagun  y  al 


70 

Páginas. 


doctor  Juan  Arias,  todos  de  su  Consejo  y  sus  embajado- 
res en  Roma ,  cerca  de  los  negocios  en  que  habían  de 
entender  en  aquella  corte,  tomo  7.° 539 

—  Documentos  relativos  á  la  época  de  sus  conquistas  en 
Andalucía,  tomo  41 461 

—  Carta  del  Rey  Católico  al  doctor  Talavera  y  á  Fernand 
Alvares  sobre  proveimiento  de  dinero  y  víveres  para  el 
cerco  de  Baza,  tomo  11 461 

—  Id.  á  los  mismos  sobre  provisiones  y  abastecimiento  de 
víveres,  tomo  11 468 

—  Id.  á  Fernando  de  Zafra  respondiéndole  á  varios  puntos 

que  habia  consultado,  tomo  11 512 

—  Id.  al  mismo ,  entre  otras  cosas ,  sobre  el  pasaje  á  Áfri- 
ca del  rey  Muley  Babdilí,  tomo  11 556 

—  Documentos  relativos  á  los  Reyes  Católicos  sobre  suce- 
sos y  negocios  en  Andalucía ,  verificada  ya  la  conquista 
de  Granada.  Hay  varios  documentos  de  Fernando  de  Za- 
fra, tomo  14,  desde  la  pág.  462  hasta  la 504 

—  V.  Escritura  de  confederación,  otorgada  en  19  de  febre- 
ro de  1475  ante  el  coronista  Alonso  de  Falencia,  en  que 
D.  Enrique  de  Guzman,  duque  de  Medinasidonia ,  reco- 
noce y  jura  á  D.  Fernando  y  doña  Isabel  por  herederos 

de  los  reinos  de  Castilla  y  León ,  etc.,  tomo  21 553 

Ribera  (  Fr.  Buenaventura  Fuster  de).— V.  Fuster  de 
Ribera  (Fr.  Buenaventura),  tomo  5.°  págs.  127  y  si- 
guientes. 

Rodríguez  de  Villafiierte  (Juan).— Venta  de  dos 
navios  que  hizo  á  Hernán  Cortés,  tomo  2." 416 

Rojas  (Francisco  de),  ingeniero.— V.  Andrea  Doria  (Juan), 
tomo  2.° Í95 

Roma  (Asalto  y  saco  de)  por  el  ejército  imperial ,  en  nia- 
vo  de  1527,  tomo  7.° 448 


71 

Páginas. 

—  Fragmento  de  carta  sobre  el  asalto  y  saco  de  Roma  en 
mayo  de  1527  etc. — Y.  Salazar  (Francisco  de),  tomo  13.    515 

Kuiz  de  Calcena  (Juan). — Carta  que  escribió  al  car- 
denal de  España  Fr.  Francisco  Jiménez  de  Cisneros,  fe- 
cha en  28  de  enero  de  1516 ,  pocos  dias  después  de  la 
muerte  del  Rey  Católico,  tomo  7." 572 

Riilz  de  Castro  (D.  Fernando),  conde  de  Lemos ,  to- 
mo 25 280 

Rnlz  Maharro  (el  P.  Fr.  Pedro). — Relación  de  los  he- 
chos de  los  españoles  en  el  Perú,  desde  su  descubrimiento 
hasta  la  muerte  del  marqués  Francisco  Pizarro,  tomo  26.    232 

Salamanca  (Ciudad  de). — Instrucción  que  dio  á  los  pro- 
curadores que  en  su  nombre  debian  asistir  á  las  Cortes 
de  Toledo  de  1525,  tomo  2." .     543 

Salazar  (Francisco  de).— Fragmento  de  carta  sobre  el 
asalto  y  saco  de  Roma  en  mayo  de  1527,  etc.,  tomo  13.     515  * 

Sánchez  de  las  Brozas  (Francisco). — V.  Rrocense, 
tomo  2.°,  pág.  5  y  siguientes. 

—  Memorias  sobre  varios  sucesos  del  reinado  de  Felipe  2,", 
tomo  7.",  pág.  5  y  siguientes. 

San  Gerónimo  (Fr.  Juan  de). — Memorias  sobre  va- 
rios sucesos  del  reinado  de  Felipe  II,  tomo  7,°  desde  la 
página  5  hasta  la 442 

— V.  Lepante.  Relación  de  la  batalla  naval  de  este  nombre, 
sacada  de  un  códice  del  Escorial ,  que  tiene  por  título 
Memorias  de  Fr,  Juan  de  San  Gerónimo,  tomo  3."  .  .     239 

San  Quintín  (Batalla de),  tomo 9." 486- 

Santa  Cruz  (Marqués  de).— Se  hace  mención  de  él  en    .  wi 


72 

Págitias. 

las  relaciones  de  la  batalla  naval  de  Lepante,  lomo  3.* 

Santander  (Doctor  Pedro  de) . — Carta  del á  S.  M. 

sobre  población  de  la  (Florida  1557),  tomo  26  ....    340 

Santo  Domlng'o  (Isla  de). — Creación  de  su  audiencia, 
la  primera  que  se  estableció  en  los  dominios  españoles  de 
América,  tomo  2." 273 

—  Privilegios  concedidos  á  los  labradores  que  de  España 
pasasen  á  la  misma.  —  V.  Carlos  V,  tomo  2.° 204 

—  De  los  excesos  cometidos  contra  los  indios  de  Santo  Do- 
mingo, y  su  remedio. — V.  Zuazo  (Licenciado  Alfonso 
de),  tomo  2." 347 

Sanz  del  Rio  (D.  Julián).— V.  Wolf  (D.  Fernando), 
tomo  22 309 

Sarabia  (Alonso  de).— Su  sentencia  y  decapitación,  to- 
mo 1.° 289 

Sebastian  (D.),  (rey  de  Portugal). — V.  Correspondencia 
de  Felipe  II  y  de  otros  personajes  sobre  el  casamiento  de 
D.  Sebastian,  rey  de  Portugal,  con  doña  Isabel,  hija  se- 
gunda del  emperador  de  Austria,  desde  1567  hasta  1569, 
tomo  28 ,  desde  la  pág.  425  hasta  la 363 

Sepülveda  (Doctor  Juan  de). — Carta  á  Felipe  II,  dán- 
dole consejos  sobre  el  modo  de  hacer  la  guerra  y  de 
aprestar  gente  y  galeras,  tomo  8." 360 

Serrano  (Fr.  Alonso). — Religioso  franciscano,  nombrado 
confesor  por  Felipe  II  de  las  galeras  y  ejército  que  man- 
daba D.  Juan  de  Austria.— V.  Felipe  U,  tomo  3." 

Servia  (P.  Fr.  Miguel).— Franciscano  y  confesor  de  don 
Juan  de  Austria. —  Relación  de  los  sucesos  de  la  ar- 
mada de  la  santa  liga ,  y  entre  ellos  el  de  la  batalla  de 


75 

Páginas. 


Lepanto,  desde  1571  hasta  1374  inclusive,  tomo  11.     359 

—  Algunas  noticias  biográficas  del  mismo,  tomo  11..   .   .     339 

Sevilla  (Ciudad  de). — V.  Gasea  (el  licenciado  D.  Pedro 
la),  tomo  26 177 

Sierra  (D.  Lamberto  de). — Razón  que  envió  á  Carlos III, 
de  la  suma  que  por  derechos  de  quintos  y  diezmos  reales 
habian  rendido  los  caudales  sacados  del  famoso  Cerro  de 
Potosí  desde  1556  hasta  178o.  Dase  también  noticia  del 
modo  y  por  quien  se  descubrió  este  tesoro ,  tomo  5.) .  .     170 

SUIeeo  (D.  Juan  Martinez), — Su  nombramiento  de  arzo- 
bispo de  Toledo,  hecho  por  Carlos  V  en  Gante  á  23  de 
octubre  de  1545  (en  la  nota) ,  tomo  1.° 151 

Silva  Palentina.  Fragmento  de  la sobre  las  co- 
munidades de  Castilla,  tomo  2.° 329 

Sobreniente(D.  Gaspar  de).— -Encargado  de  los  nego- 
cios de  la  embajada  de  Roma.— Carta  á  Felipe  IV  sobre 
la  canonización  de  Santo  Tomás  de  Yillanueva,  tomo  5.°    154 

—  Otra  carta  á  dicho  rey  sobre  el  mismo  asunto,  tomo  5.»    135 

Sosa  (Juan  Alonso  de). — Carta  de á  S.  M.  sobre  sus 

servicios  y  pueblos,  tomo  26 335 

Soto  (El  secretario  Juan  de).— Carta  de  D.  Garcia  de  To- 
ledo enviándole  de  orden  de  D-  Juan  de  Austria  dos  me- 
moriales para  que  informase  sobre  su  contenido.  21  de 
mayo  de  1573,  tomo  3.° 117 

Sotomayor  (Pedro  de). — Sentencia  contra vecino 

de  Madrid  y  procurador  por  la  misma  villa  en  la  junta 
de  los  comuneros  de  Avila ,  y  su  ejecución  en  Medina  del 
Campo,  á  13  de  octubre  de  1522,  tomo  11 455 


74 

Páginas. 


Suarez  de  Flg^iieroa  (Cristóbal).— Descripción  del 
reino  de  Ñapóles  en  el  siglo  XV  bajo  la  dominación  de 
los  españoles,  sacada  del  Pasajero  de edición  de  Ma- 
drid, por  Luis  Sánchez,  año  1617,  tomo  23 17 

Siiarez  de  Alentloza  (D.  Lorenzo). — V.  Coruña  (con- 
de de),  tomo  26 373 

Talavepa  (Fr.  Hernando  de),  arzobispo  de  Granada. — 
Carta  á  los  Reyes  Católicos  sobre  el  arrendamiento  de 
las  Alpujarras ,  tomo  11 519 

Tellez  Oiron  (D.  Pedro) ,  duque  de  Osuna,  tomo  23.  .     250 

Terranova  (duque  de). — Carla  que  envió  á  Felipe  IV, 
siendo  su  embajador  en  Roma ,  dándole  cuenta  de  haber 
sido  canonizado  Santo  Tomás  de  Villanueva ,  tomo  5.°  .     132 

Toledo  (ayuntamiento  de). — V.  Murcia  (ciudad  de),  lo- 
mo 2." 518 

Toledo  (ciudad  de). —  Instrucción  que  dio  á  los  procura- 
dores que  en  su  nombre  debian  asistir  á  las  ^Cortes  de 
Valladolidde  1525,  tomo  2." 538 

—  Carta  de  su  ayuntamiento  al  de  Madrid ,  su  fecha  25  de 
febrero  de  1520  sobre  cosas  que  debian  pedir  á  Carlos  V, 

en  que  convenia  ponerse  de  acuerdo,  tomo  2.°    ....     307 

—  Id.  de  id.  á  id.,  su  fecha  27  de  noviembre  de  1520  pi- 
diendo auxilio  de  gente  y  armas.  (Tratábase  de  las  Co- 
munidades, tomo  2.° ,    . 308 

■•1 
Toledo  (D.  Antonio  Sebastian  de). — V.  Instrucción  que 

de  orden  del  rey  dio  el  virey  de  Méjico á  su  sucesor 

en  22  de  octubre  de  1673,  tomo  21 438 

Toledo  (D.  Fadrique  de),  hijo  del  duque  de  Alba. — Cau- 


75 

Paginan. 

sas  que  dieron  molivo  á  su  prisión  y  á  la  de  su  padre, 
tomo  7." 404 

—  Id. — V.  Documentos  (nuevos)  sobre  las  causas  que  die- 
ron motivo  á  la  prisión  de  D.  Fadrique ,  hijo  del  duque 

de  Alba,  y  también  á  la  del  mismo  duque,  tomo  8."  .     483 

Toledo  (D.  Francisco  de). — Documentos  relativos  á..  .. 
siendo  virey  del  Perú ,  tomo  lo 549 

—  Memorial  que  D dio  á  Felipe  II  sobre  el  estado  en 

que  dejó  las  cosas  del  Perú,  de  que  fué  virey  y  capitán       to*^! 
general  trece  anos ,  tomo  26 122 

Toledo  (D.  García  de). — Carta  á  D.  Luis  de  Requesens 
exponiendo  las  razones  que  en  su  concepto  podian  hacer 
la  armada  de  la  Liga  inferior  á  la  del  turco.  Pisa  1."  de 
agosto  de  lo71 ,  tomo  3.° 8 

—  Parabién  que  dio  á  D.  Luis  de  Requesens  por  la  victoria 

de  Lepanto.  Pisa  o  de  noviembre  de  lo71 ,  tomo  3."..   .     387 

—  Carta  de  creencia  que  escribió  al  duque  de  Alba  en  fa- 
vor del  secretario  Juan  de  Soto.  Ñapóles  49  de  abril  de 
1374,  tomo  3." i55 

—  Carta  que  escribió  al  secretario  Juan  de  Soto  sobre  su 

ida  á  la  corte.  Ñapóles  19  de  abril  de  lo74,  tomo  Z.\  .     153 

—  V.  Austria  (D.  Juan  de). 

—  V.  Soto  (El  secretario  Juan  de). 

—  V.  Escobar  (Francisco  de). — Discurso  de  la  jornada  que 
se  ha  hecho  con  las  galeras  que  adelante  se  expresa- 
rán en  este  año  de  1564,  por  mandado  de  la  majestad  del       -* 
rey  de  España D.  Felipe  II,  etc.,  siendo  capitán  general 

de  la  mar  el  excelente  señor  D.  García  de  Toledo,  to- 
mo 14 504 

—  V.  Documentos  relativos  á  la  conquista  del  Peñón  por.... 

en  lo64,  tomo  27 ,  desde  la  pág.  398  hasta  la 574 

—  V.  Advertencias  que  el  duque  de  Medinaceli  (D.  Juan 

de  la  Cerda),  dejó  á sobre  el  gobierno  del  reino  de 

Sicilia,  tomo  28,  desde  la  pág.  504  hasta  la 564 


76 

Paginan. 

—  V.  Correspondencia  de  Felipe  U  con  D y  otros,  de 

los  años  1565  y  1566,  sobre  los  preparativos  terrestres 
y  marítimos  para  defender  la  Goleta ,  Malta  y  otros  pun- 
tos contra  la  armado  del  turco ,  tomo  29 5 

Toledo  (D.  García  de),  ayo  del  príncipe  D.  Carlos. — Fac- 
símile de  la  firma  de tomo  27 182 

Toledo  (D.  Pedro  de) ,  marqués  de  Villafranca,  tomo  23.     106 

Toledo  Osorlo  (D.  Fadrique  de) ,  marqués  de  Villa- 
franca,  tomo  25 533 

Toledo  (Santa  iglesia  de). — V.  Frias  (P.  Fr.  Lorenzo). 
Breve  noticia  de  los  manuscritos  de  la  Biblioteca  de  la 
Santa  iglesia  de  Toledo,  tomo  9." 566 

Toro  (Batalla  de).— V.  Rey  Católico  (D.  Fernando  V). 
Carta  á  la  ciudad  de  Baeza  haciéndole  saber  la  victoria 
conseguida  en  la  batalla  de  Toro,  tomo  13 396 

Trento  (Concilio  de).— Noticia  de  los  españoles  que  asis- 
tieron al tomo  9." 5 

■ —  Documentos  relativos  al  Concilio  de  Trento,  tomo  9." 
desde  la  pág.  81  hasta  la 406 

Tribiileio  (Cardenal  Teodoro). —Carta  á  Felipe  IV, 
siendo  su  embajador  en  Roma ,  sobre  la  canonización  de 
Santo  Tomás  de  Villanueva,  tomo  5." 126 

—  Id.  á  dicho  rey  sobre  el  mismo  asunto,  tomo  5.".   .   .     126 

Túnez  (Conquista  de)  en  1535.— V.  Carlos  V,  lomo  1.', 
pág.  154  y  siguientes. 

—  V.  Austria  (D.  Juan  de). 

—  V.  Carlos  V. 

—  V.  Doria  (Antonio). 

—  V.  Felipe  II,  tomo  5.° 


77 

Púoitwx. 

TiirrSano  (Leonardo),  ingeniero  mayor  de  Portugal.— 
Parecer  que  dio  á  Felipe  IV  sobre  la  navegación  del  rio 
Guadalete  á  Guadalquivir  y  á  Sevilla,  tomo  3.°  .   ...     189 

Valencia  (Cabildo  de  la  santa  iglesia  de).— Carta  á  Fe- 
lipe II  dándole  gracias  por  haber  nombrado  el  emperador 
su  padre  á  Santo  Tomás  de  Yillanueva  prelado  de  aque- 
lla silla  metropolina,  tomo  5." 82   ' 

Valols  (Isabel  de). — Recibimiento  que  le  mandó  hacer 
Felipe  II  cuando  vino  de  Francia  á  desposarse  con  él. — 
Y.  Felipe  II,  tomo  3.»,  desde  la  pág.  418  hasta  la.    .   .     448 

Velasco  (D.  Luis  de). — V.  Relación,  apuntamientos  y 

avisos  que  por  mandado  de  S.  M.  di  al  Sr.  D visorey, 

y  gobernador  y  capitán  general  desta  Nueva-España, 
tomo  26. .   .   .' 284 

Velazquez  (Diego). — Instrucción  que  dio  en  la  isla  Fer- 
nandina  á  23  de  octubre  de  1518  al  capitán  Hernán  Cor- 
tés al  enviarle  con  una  armada  en  socorro  de  la  de  Juan 
de  Grijalba,  tomo  1." 383 

—  Carta  que  escribió  juntamente  con  Gonzalo  de  Guzman 
y  Panfilo  de  Narvaez  en  la  isla  Fernandina  á  12  de  octu- 
bre de  1319  al  Presidente  del  Consejo,  según  parece,     i,   # 
quejándose  de  Hernán  Cortés ,  tomo  1^.° 472 

—  Memorial  que  presentó  á  S.  M.  Renito  Martinez  en  nom- 
bre de  Diego  Velazquez  contra  Hernán  Cortés.— V.  Mar- 
tinez (Renito),  tomo  1." 407 

—  V.  Audiencia  de  Santo  Domingo,  tomo  1." 495 

Velazquez  de  Bazan  (D.  Antonio). — Memorial  acer- 
ca de  la  merced  que  pide  á  S.  M.  como  pariente  mas  pro- 
pincuo y  heredero  del  Adelantado  Diego  Velazquez ,  cu- 
yos servicios  enumera  desde  el  año  1308  hasta  el  de  1324 
en  que  envió  cuatro  armadas  á  sus  expensas  para  los  des- 


n 

Páginas. 

cubrimientos  y  conquista  de  las  Indias  con  Francisco 
Hernández  de  Córdoba,  Juan  de  Grijalba ,  Hernando  Cor- 
tés y  Panfilo  de  Narvaez  por  capitanes  de  las  dichas  ar- 
madas, tomo  4." 232 

Velcas  (marqués  de  los) ,  tomo  23 539 

VeleaE  de  la  Oomcpa.  —  V.  Navarro  (conde  Pedro). 
— Sucesos  de  las  armadas ,  así  españolas  como  turques- 
cas, con  la  noticia  de  como  el  conde  Pedro  Navarro  cons-  «oI«  # 
truyó  el  año  de  1542  una  fortaleza  en  el  Peñón  de  Ve-         ■ 
lez  de  la  Gomera,  tomo  45 503 

Veleas  de  Oiievapa  (D.  Iñigo),  conde  de  Oñate,  to- 
mo 23 526 

"Wenida  de  virey,  tomo  23 654 

Verag^iia. — V.  Relación  de  las  minas  de su  tierra, 

distrito  y  población ,  tomo  26 365 

Vlllafuerte  (Juan  Rodríguez  de). — V.  Rodríguez  de 
Villafuerte  (Juan) ,  tomo  2.'' 446 

VíUanaeva  (Fr.  Jaime). — V.  Noticia  del  viaje  litera- 
rio emprendido  de  orden  del  rey  en  el  año  1802.  Es- 
crito en  1814,  etc.,  tomo  24 583 

l^illanueva  (Santo  Tomás  de).— Copia  literal  de  varias 
cartas  suyas  originales ,  y  de  otros  documentos  propios 
para  ilustrar  su  vida.  Las  cartas  van  dirigidas  á  Carlos  V, 
Felipe  II,  Francisco  de  los  Cobos,  y  á  D.  Fernando 
de  Aragón  duque  de  Calabria  y  vi  rey  de  Valencia,  to- 
mo 5.° 74 

IVolf  (D.  Fernando).— La  Danza  de  los  muertos.  Come- 


79 

Páginas. 

dia  española  representada  en  la  fiesta  del  Corpus-Christi . 
Folleto  publicado  en  alemán  por y  traducido  al  cas- 
tellano por  D.  Julián  Sanz  del  Rio,  tomo  22 509 

Xoara  (Fr.  Juan  de),  religioso  franciscano,  nombrado 
confesor  por  Felipe  II  de  las  galeras  y  ejército  que  man- 
daba D.  Juan  de  Austria. — V.  Felipe  II,  tomo  o." .   .   .     186 

Yg-areí a  •(Andrés). — Carta  que  escribió  á  Pero  NuSez  de 
Herrera  desde  Gibraltar  después  que  se  libertó  de  la  pri- 
sión de  Barbaroja ,  donde  relata  como  este  fué  á  pedir 
ayuda  al  gran  turco  para  ocupar  la  ciudad  de  Túnez  y 
todo  su  reino :  en  cuyo  viaje  anduvo  de  cautivo  el  mismo  «"*»Sl 
Ygarcía,  tomo  2." 381 

Zafra  (Fernando  de), — Carta  sobre  el  proveimiento  de 
trigo  y  cebada  para  los  Reales,  tomo  11 463 

—  Id.  á  la  Reina  Católica,  noticiándola  la  partida  del  Rey 
á  sentar  su  Real  en  el  Padul,  y  la  gente  que  reunia, 
tomo  11 480 

—  Id.  del  mismo  y  del  licenciado  Calderón ,  consultando 
varios  artículos  de  las  capitulaciones  de  Granada,  to- 
mo 11 481 

—  Id.  de  Fernando  de  Zafra  á  los  Reyes  Católicos ,  avi- 
sando la  dificultad  de  hallar  dinero ,  con  otras  cosas  del 
gobierno  interior  de  Granada,  tomo  11 ,  desde  la  pági- 
na 484  hasta  la 561 

—  Id.  á  Luis  Fernandez  Portocarrero  sobre  que  no  podian 
los  moros  llevar  armas  en  su  pasaje ,  á  excepción  de  muy 
pocos,  tomo  11 558 

—  V.  Reyes  Católicos ,  tomo  14 ,  desde  la  pág.  462  hasta  la    504 

Zapata  (D.  Antonio),  cardenal,  tomo  25 408 

Zuazo  (Licenciado  Alfonso  de).  —  Carta  que,  después  de 
enviado  con  poderes  amplios  á  la  isla  de  Santo  Domingo 


80 

Páginas. 


por  el  cardenal  de  Cisneros ,  escribió  al  ministro  Xevres 
en  22  de  enero  de  1518  sobre  los  excesos  cometidos  en 
aquella  isla  contra  los  indios,  y  su  remedio,  tomo  2.".     347 

—  Su  biografía,  tomo  2." 375 

Zimi|;^a  (Fr.  Antonio  de). — Carta  á  Felipe  II.  Perú  15 
de  julio  de  1379,  tomo  26 87 

Ziíñig>a  (D.  Juan  de). — V.  Alba  (Duque  de),  tomo  4." 

—  V.  Austria  (D.  Juan  de),  tomo  3.° 83 

—  V.Felipe II,  tomo  7,« 529 

Zúñigpa  (D.  Juan  de),  conde  de  Miranda,  tomo  23.   .  .     2G1 

Zünig^a  ( D.  Juan  de ) ,  príncipe  de  Pietra  Persia ,  tomo  23    2  i5 

Ziíñlg^a  y  Fonseca  (D.  Emanuel  de),  conde  de  Mon- 
terey  y  Fuentes ,  tomo  23 451 


^TT)¡2(gQ:£)Sí. 


DávUa  (D.  Sancho).— Documentos  relativos  á ge- 
neral de  Felipe  II,  tomo  30 453 


DP 
3 

C65 

t.30 


Colección  de  documentos 

inéditos  para  la  historia 
de  España 


PLEASE  DO  NOT  REMOVE 
CARDS  OR  SLIPS  FROM  THIS  POCKET 

UNIVERSITY  OF  TORONJO  LIBRARY 


CIRCÚLATE  AS  MONOCRAPH 


'^J^-4* 


-->'Jk: 


"«rs 


iíés.