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Full text of "Gazeta de Buenos-Ayres"

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NuM.  t6.  Pág.  245 

4«  4*  4^  -í*  '^'  •^'  '^*  4*  '^  '^•'  '^  'í*  •^"'  'í*  4*  4*  •^  'í"  *í*  -^  '"í*  '5^  4"  'í'  "^  '^  4* 

GAZETA    DE    BUENOS-AYRES. 

JUEVES  20  DE  SETIEMBRE  DE   18 10. 


z::::Rard  tcm^^orum  felicítate  ,    nhi  sentiré  qudi  velist 
et  qfive  sentías ,    dícere  licet. 
Tácito   lib.  I.  Hist. 


Buenos- Ajares  16  de  Seftiemhre  de  íSio. 

JL^*  ada  se  presenta  mas  lisongero  á  un  gobierno  empe- 
ñado sinceramente  en  la  felicidad  de  los  pueblos,  que  ver  á 
estos  agitados  en  las  qüestiones  y  ocurrencias,  que  tocan  di- 
rectamente á  la  comunidad.  El  déspota  que  teme  el  descubri- 
miento de  su  conducta,  procura  sofocar  en  los  hombres  hasta 
el  deseo  de  examinarla,  y  prefiere  sepultarse  en  los  abismos 
¿Q  que  su  propia  ignorancia  lo  rodea ,  antes  que  permitir 
aquellas  francas  discusiones,  que  producen  I03  recursos  consi- 
guientes a  una  general  ilubtracion.  Por  fortuna  la  confianza 
reciproca  de  los  que  gobiernan  ,  y  di  ios  que  son  gobei  naios 
forma  la  base  mas  firme  del  nuevo  g<ibievnu;  y  prestando  ébte 
el  oido  constantemente  á  el  eco  de  la  voluntad  general ,  la 
encuentra  siempre  uniforme  en  aquellas  medidas,  que  rer-no- 
verán  al  fin  todos  lus  emDaiazos ,  que  parecen  haberse  conju- 
rado,   par»  sofocar  v'i  su  cuna  nues-ra  naviente  felicidad. 

¡Con  qr,***'f^htusi.ísmü  se  ha  explicado  el  pueblo  acerca 
de  la  conducta"  y  cont-istaciones  d^;l  capitán  Elliot,  relativas 
á  el  bloquee  Je  esta  Capital]   ¿QueiiÁuÍYidiio  de  la  sociedad 


rapjcB. 


2-46, 

no  ha  tomado  ínteres  en  estci  ocurrenda?  ¿Qnién  no  ha  Ah- 
currido  sobre  elia?  ¿Quiéa  no  ha  blasfemado  contra  los  per- 
turbadores de  nuestro  sosiego?  ^Y  quién  no  ha  renovado  ante 
ia  sagrada  memoria  de  la  patria ,  el  voto  solemne,  de  perder 
la  vida,  antes  que  reducirse  á  pasarla  en  la  vergonzosa  escla- 
vitud de   nuevas   cadenas  ? 

Sorprendidos  los  habitantes  de  Buenos- Ayres  con  una 
conducta,  que  nunca  debieron  esperar  de  un  oficial  de  S.  M.  B.,, 
se  resistieron  á  creer,  que  el  capricho  ,  ó  la  predisposición 
personal  fuesen  el  único  agente  de  aquellas  acciones.  ¿  Cómo 
es  posible,  decían,  que  quando  el  Ministro  inglés  residente 
en  el  Brasil,  repite  las  demostraciones  mas  lisongeras  en  favor 
de  la  Junta;  quando  los  comerciantes  ingleses  residentes  en 
esta  ciudad  confiesan  la  generosa  hospitalidad  con  que  los  ame- 
ricanos los  distinguen ,  y  estrechan  ios  vínculos  de  una  venta- 
josa y  permanente  comunicación;  quando  el  estado  de.  la  Eu- 
ropa presenta  en  las  Aniéricas  el  único  teatro,  que  indemnizará 
á  el  comercio  inglés ,  las  quiebras  que  ha  sufrido  en  sus  anti- 
guas relaciones;  quando  el  gobierno  de  Buenos -Ayres  sa 
apresura  i  romper  las  trabas  destructoras,  que  privaban  á  los 
extrangeres  de  tener  parte  en  las  riquezas  de  este  vasto  cqx^- 
timntQ,  como  es  posible  ,  que  en  semejantes  circunstancias  uii 
oficial  de  marina  atropelie  los  intereses  de  su  nación ,  rom^a 
unas  relaciones  nacientes,  que  quizá  sea  después  diíiciU-e.parar, 
y  despreciando  el  clamor  de  sus  compatriotas.,  los 'mire  coa 
Ojo  sereno  envueltos  en  las  quiebras  y  perjuicios  consiguiente^ 
á   tan  inesperado  bloqueo  I  '       \ 

,  Les  fuerza  de  estas  reflexiones  hacía  creqr  á  el  pueblo.  / 
que  el  capitán  EHiot  obraba  en  virtud  de  instruccioiies 
secísras,  que  le  hubiesen  prefixado  aquella  conducta,  y  rece- 
lando, que  hubiese  un  empeño  oculto  en  .fomentar  la  división 
de  estas  provincias,,  para  sacar  provecho  de  su  debilidad;  ex- 
clamaban todos  generalmente.  „;  Hombres  inhumanos,  que  mk 
í>  fando  con  pesar  ios  principios  de  nuestro  bien  ,  h^ii^  derra^ 
»jrnado  mil  males  ,  que  envuelvan  eo  --aaiW..»^^líi^ccr  pu-" 
5»  ro  de  nue^>tra  regeneración  !  ¡  Hombres  ingr^if  que  haoei^ 
?j  pretendido  despojaruos  de  algún  punto   de  nuestro  terreno. 


H7  . 
Men  el  mismo  instante  que  con  sincera  generosUad  ,  os  ofre- 
j>  i-iamos  por  un  comercio  bien  sostenivio ,  todas  las  riquezas 
»que  produce!  ¡  Hombres  injustos,  que  fomentando  estorbos 
»  a  la  consolidación  de  una  obra  ,  cuya  legalidad  habéis  confe- 
jjsado,  os  ponéis  de  parte  de  la  mala  causa  por  el  vil  interés 
» de  los  escombros,  que  aquella  pueda  dexaros  en  su  ruina! 
jjPero  al  mismo  tiempo  hom^bres  imprudentes ,  pues  descu- 
»briendo  miras  ambiciosas  con  demasiada  anticipación,  dais  á 
>)la  América  entera  una  lección  de  la  reserva,  con  que  debe 
»»?onducirse;  poniendo  términos  á  aquella  franqueza  generosa 
i>  con  que  ác>¿^^  el  principio  os  há  brindado.'* 

Estas  reñexiones ,  que  han  formado  la  conversación  familiar- 
de  nuestros  compatriotas,  descubren  en  ellos  todo    el   interés 
por  la  causa  publica  ,  que  produxo  los  prodigios  de  los    ti.^m- 
pos  heroicos.  Es  muy  laudable  que   un   pueblo   se  agite ,  y  se 
desvele  por  sucesos,  que  le  tocan  tan  de  cerca;  pero  es  un  de- 
ber de  los  encargados  de  la  pública  felicidad,  manifestar  aque- 
llas relaciones  ,  que  se  ocultan  á  los  que  no  las  manejan  por   sí 
mismos;  y  dirigir  de  este  modo  ese  entusiasmo  sagrado  de    ios 
pueblos ,  libre  de  las  preocupaciones,  que  un  exceso  de   zelo 
produce  muchas  veces- 
La  conducta  del  capitán  EUiot  es  indisculpable;  y  en  todo 
el  mundo  se  oirvá  con  escándalo,  que  un  oficial  de  S.M.  B.  rom« 
pa  las  poderosas  relaciones  que  el  comercio  de  su  nación  había 
entablado  en  el  Rio  de  la  Plata,  sin  otro  principio^  que  la  in- 
timación de  un  gobierno  subalterno ,  refractario  del  orden  pu- 
blico, y  que  no  puede  alegar  título  alguno,  que    lo  arme    de 
representación  legitima,  para  declaiar  un  bloqueo:  pero  sería 
una  temeridad  derivar  este  procedimiento  de  otro  origen,  que 
del  sibtéma  personal  que  se  propuso  este  oficial  desde  su  arribo 
á  estas  re^jiones.  U.}a  adhesión  anticipada  á  Montevideo,  y  la 
intima  unión  con  un   comerciante   indés    residente   en   aquel 
pueblo,  (^.á  quien  la  Junta  acaba  de  arrojar  de  su  territorio) 
serán  quizá  el  principio  de  unas  resoluciones,  que  en  la  extre- 
mada miparcialidad,  que  afectan ,  inñeren  un  quebranto   irre- 
parable á  el  comercio  de  su  nación.',  . 

Ljl  conduaa  d^l  ministro  de  su  S.  M.  B.  residente  ea 


248 

el  Brasil  destruye  bástalos  menores  recelos;  pues  díriaféndo 
5e  a  la  Junta  con  ofrecimientos  expresivos,  que  indicarla  ^^s 
ftyorable  deposición  ,  es  imposible  ,  que  p;r\l,un  00    ó,^? 
m  del  gobierno  ,ng  és  se  hubiesen  comunicado  órdenes  contS 
ms  a  la    substanoa  de  aquellas  comunicaciones.  E    ve  d'í 
queel  Lord  Strangford  no  reviste  el  carácter  público  S  su 
W.n,ster,o,  quando  manifiesta  á  la  Junta  los  sentimientos  pi 
señales  de  una  favorable  adhes.on ,  pero  «„  Ministro  d^J^ 
go  y  acreditados  talentos,  no  habría  comprometido  la    se.u'i 
dad  de  su  propio  jurcio  ,  sino  lo  contemplase   garantido  ptr'ía' 
prea.spos,c.o„  de  su  gabinete,  y  por  elinterls  de  su  n^La 


El  que  observe  las  relaciones  políticas  de  la  Europa  en  eí 
tos  ultmios  tiempos,  descubrirá  que  todas  ellas  no  Jan  sobrJ 
orro  exe,  que  e!  interés  recíproco  de  las  naciones ,  que  cop^. 
tf ,  todo  gabinete  se  ha  decidido  á  la  guerra ,  ape  laTse  le  í  1" 
ofrecido  ventajas  en  su  ejecución;  y  cL  la  misma  faci  dd  hí 
vuelto  a  la  paz,  apenas  cesaron  aquellas  esperanzas,  ó  se  t 
brindaron  mayores  en  una  negociación.  El  espíritu   merCntH 

?fSio'd!rt''^''"''í'"''°V^^-^  ^"  ^----"  "y 

ei  ca..ulo  de  ínteres  influye  en  las  empresas  políticas  del  mCÍ 
modo  que  en  las  especulaciones  de  un  negocLue  °' 

i  or  este  principio  la  Inglaterra  no  puede  aventurar  en  hs 
Amencas  ninguna  empresa  avanzada,  que  concitando  conL' 
ele.piruu  publico  de  estas   regiones,  dexe  comnrom»ti  1     ll 
iiaion  y  franca  comunicación  detestes  pueblos .  oíetítóint 

;Sn7irs?:or""-  ''"''^^"^  el^^erado;  de  iJs  fa„  I 
extendió  su  poder  por  todss  las  costas  de  Europa,  se  cerraron  ¡ 
el  comercio  inglés  las  puertas  principales  del  ¡nm  nso  g^;o  oue 
forma  su  riqueza.  Es  necesario,  abrir  nuevos  canales,  que  áuTn! 
do  no  suplan  enteramente,  indemnizen  de  algún  modo  ■clv'-l 
gran  quebranto  ,.  y  e!  vasto  continente  de  la  Américre"  dtú 
-refirió ,  que  qued.  á  las  relaciones-  merca„t*¿^  U  ^ 

Este  conocimiento,  ha  empeñado- á  el   Emperador   de   los 
aos.de.toda  comuiUQaqion  con  la  Inglaterra.  En  las  instruí 


Clones  secretas,  que  se  han  sorprendido  á  sus  emisarios  orrece 
una  pioLeccioii  decidida,  extendicndola  á  los  términos  mas  li- 
songeros  para  los  pueblos  de  América,  con  tal  que  éstos  se 
conccatrea  en  sí  mismos,  y  cerrando  sus  puertos  á  los  ingleses, 
les  hagan  sentir  todo  el  peso  de  la  iacomunieacion,  que  sufren 
en  Eu7'opa.  El  riesgo  que  inducen  estas  promesas  es  muy  gran- 
de seguramente:  y  el  que  medite  con  discernimiento  el  actual 
estado  v  verdaderos  intereses  de  la  Gran  Bretaña  ,  calculará 
quan  grandes  esfuerzos  debe  hacer  aquella  potencia,  para  que 
las  inti-itnis  de  la  Francia  no-  hallen  aceptación  en  ningún  pun- 
to de    la    A  mélica. 

Todo  inglés  que  ame  verdaderamente  á  su  nación  ,  habrá 
observado  con  ternura,  la  generosa  resolución  con  que  las 
provincias  del  Rio  de  la  Piara  disiparon  aquellos  peligros, 
afirmandíí)  de  un  modo  indestructible  las  relaciones  mercantiles 
mas  ventajosas  para  la  Gran  Bretaña,  Una  general  proscripción 
de  todas  las  pretensiones  de  la  Francia ,  un  Iranco  y  libre  co- 
mercio con  la  nación  inglesa,  reglamentüs  liberales  que  aumen- 
tasen estas  relaciones-  sobre  la  firme  base  de  reciprocas  ventajas,, 
una  amistad  preveniente  dispensada  á  todo  individuo  inglés 
residente  en  este  suelo,,  tales  han  sido  las  medidas,  que  la  Li« 
glaterra  G.ebió- pretender  d.caosotiüs,  y  que  liemos  aaticipa- 
do  generosamente.. 

^En  estas,  circunstancias-  es  Iniposible  ,  que  la  profunda  po- 
iittca  de  los  Ministros  ingleses  se  equivocase  de  un-niodo  taa 
arriesgado ;   ¿  por  qué  qual  sería  el  resultado  de  una  preten- 
úon  tan  irritante,  como  es  la  ocupación  d.e  un  punto  de  nues- 
tro territorio  á  la  sombra  de  nuestras  divisiones?.  La  Améric^í 
entera  miraría  con  horror  á  los  ingleses ,  que  así  habian  abu- 
sado del  candor  y  franqueza   de  sus  habitantes:  la  conserva^ 
cion  del  punto  usurpado  sería  de  muy  corto  provecho ,  des- 
pués del  general  encono  que  debia  producir  ea  los  amerrcanos,. 
y   nunca "podr'i  equivaler  á  las   incalculables    ventajas,   que 
debia  producir  la  franca  y  genervil  admisión  en  todos  nuestros 
puertos:  |la  Inglaterra  se  vería  precisada  á  consumir  crecidos 
fondos  en  la  guarnición  y  defensa  de  ün  punto,  que  el  pais. 
miiaria.  siempre  con  zelos,  y  sobre  cuyíi  recuperación  calcula- 


■HMMH 


Mi 


m 


ría  perpetuamente:  y  estos  gastos  absorvenaa  nna  mn  parte 
de  los  productos,  que  por  n^edio  de  un  comercio  ilb^rriíÜ 
ganan  a  Leñares  s.a  mengua  alguna;  un  odio  implacable  hl 
CM  todo  .ngies,  ocupar»  el  lugar  de  la  tierna  amistad  coa  que 

r^r/T  T'^'^u  ^  '''""^""  ^°'  P°-''''°'  ''  «fí  en  los  inte. 
r..es  de  la  t^ran  Bzetana,  excitar  el  odio  y  la  guerra  del  ún  co 

ont.nente,  .jue  se  franquea  libera!me«te  á  su  anxistad  y  ^ 

IVlonte video  mísoío  e.ntrarh   en  p^tí^s  ¡A^nr 

,,  ,  ^-i-^-^ii.t   di  LbLas  ideas ,   v   se   en^^ña 

iT^iserab  emente  el  que  acepte  los  ofreci.^.ientos    /ue  aqueUo- 

pa.Dlosnerir.anos,  y  relacionados  intimamente  no  son  muy 
da  aderas ,  y  el  momento  preciso  de  una  unión  indisoluble  es 
a^pel,  en  que  aprovertiaodose  los  extrangeros  de  la  debilidad 
consigu.ente  a  toda  división,  ejecutan  las  miras  ambiciosas 
que  a  principio  habían  disfrazado  entre  los  a!h,,gos  de  ui  a 
a^gab,.  protección:  entonces  vuel.e  el  pueblo  sobre  sí  ,nis- 
mo  ,  y  íurmanao  contraste  entre  ¡os  extrangeros ,  que  lo 
amenazar: ,  v  os  h-^rimnnc  ,-i:,--^,4,„  ,  .  °  '  i  '-' 
,  y  IOS  n  r,ii,,nos.  d.s.ordes   a  quienes  amenaza  ¡í^uil 

P-ligro,  aesechan  ¡os  resentinjientos  de  sus  discordias  domés- 
ticas, y  se  reúnen  con  vigor  para  su  común  defensa. 

Üste  es  el  partido,  que  al  fin  tomaría  Montevideo,  y  que 
apresuraría    a  justicia  del  pueblo  ,   y  el  interés  dedos  misni^s 
que  lo  hubiesen  ve.diJo.  ¿  A  dónde  irían  ios  marinos    Ttó 
T.ese  el  mundo,  que  habían  puesto  una  parte  preciosa  de^.ues- 
tro  tetntotio  en  manos  extrangeras?  Nunca    irían  á   España 

T^ZllTlT'r  "°.^'--— n  P"^  presencia'  S 
ílf  ;      I       I"  '"^^^«ftria,  y  por  esto  sin   duda  han  des- 

S'f'^f  ;Í"     •'■''"  "1^""'  ^"  'i''  -  '«  ^'-'•'  ^""  i-tan. 
^  A   .  -    ^  ^^  í  V.M1   ius  txcrangaros  mismos,   porque   estos 

exiguiaa  un  servicio  laborioso ,  4  que  la  dehcadeza^de  nTes- 
nínl,  '""°'  "^  puede  acomodarse :  no  serían  admitidos  ea 

obrf.  Vr'"!^""""  '^^  ^'""r"''  P°^TJe  en  todos  ellos  ha  de 
Obra,  al  ím  la  naturaleza  lo  mismo  q.ie  entre  nosotros,  y  to- 

ra"oT,"v"  '7^77  \  ""°'  ^^°-^'-«'  1-^  habían  diLe- 
ra  o  la  integridad  de  la  Aa^erica  ,  en  obsequio  de  unas  pasio- 
nes ,  qa.  ao  hablan  podido  satisfacer  de  otro  modo.  A.i  pues 


MK 


ají 

los  mismos  dequlenes  üaicamenrc  puede  recelarse,  qucac.edaa 
á  la  introducción  de  una  potencia  cxtrangera  en  nuestro  ter- 
ritorio ,  se  asombrarían  ,  apenas  viesen  de  cerca  su  obra,  y  se 
apresurarían  á  enmendar  un  error,  que  en  todas  partes  Íes- 
cubriría  de'oprobio  é  ignominia. 

Es  imprudente  calcular  sobre  la  ocupación  de  nuestro  ter- 
ritorio ,  y  semejante  empresa  es  tan  agena  de  la  ilustración  da 
bs  Ministros  ingleses,  como  del  decoro  y  respetable  carácter 
de  su  aobierno.'lil  Rey  de  la  Gran  Bretaña  ha  empeñado  su. 
palabrada  la  faz  del  mundo,  de  que  sostendrá  la  integridad  de 
la  Monarquía  Española,  y  la  buena  fé,  que  tanto  honra  á  la 
nación  inglesa ,  proscribe  todo  acto  dirigido  á  usurpar  alguna 
parte  de  nuestro  continente  en  circunstancias,  que  con  una 
energía  sin  exemplo,  juramos  odio  eterno  á  el  usurpador  da 
la  España,,  y  eterna  fidelidad   i  nuestro   amado  Monarca  el 

Sr.  D.  Fernando. 

Es  preciso  pues  desterrar  toda  prevención  contra  los  in- 
gleses, y  dividir   la  extraña  conducta   de  un  oficial  ,   de  los- 
crénerosos  sentimientos  que  los  comerciantes  ingleses  han  acre- 
ditado en  esta  ocasión.  El  pueblo  ¿Úíq  dar  la  debida  impor- 
tancia ala  conducta  pública  de  nuestros  honrados  huéspedes,, 
y   medir  por  ella  la  opinión    general  de  esa  nación  grande  6- 
ilustrada  de  que  son  miembros,  y  no  por  los  pasos-  errados  ds- 
un  oficial  subalterno,  que  mañana   pretenderá  tal  vez^djsciil- 
parse  con  ficciones  iguales  á  las  de  Pophan,  quaiido  avisó  á  su 
corte,  aae  lo  hablamos  atacado  con  cañones  de  á  24  sobre  los^; 
templos'  Los  honrados   comerciantes,   y  aun  algunos  oficiales 
deuendientes  del  mismo  capitán  Hiliot,  han  execrado  su  con- 
ducta, han  clamado  publicamente  contra  él,  y  han.  dirigido, 
enérgicas  reclamaciones  á  su  gobierno.  Esta  comportacion  debe- 
sernos  muy  lisongera;  y  honra  mucho  el  carácter  de  la  nacioa- 
inglesa,    ver  á  e^tos  individuos    tomar    una   parte  activa  ea 
nuestras  querellas,  y  dexarse  arrebatar  de  los  últimos  accesos» 
dedwlor,  no  tanto  por  la  interrupción   de  su  comercio,  que 
no   puede  durar  mucho  tiempo ,    quanto  por  la  mengua  que 
creen  haber   recibido  el  nombre  inglés,  por   los  procedimieii- 
tos  del  capitán  Elliot  en  el  Rio  de  la  Plata.  ..  .  ;  . 


Es  un   cleber  del  gobierno  exliortar  al  pnsblo ,  á  que  de- 
ponc^a  qualesQuier  prevenciüQ  contra  los   ingleses;  pero  debe 
al   mssmo  tiempo  recomeadar   y  aplaudir  el    zelo  con  que  se 
ba  manifestaJo  líiñanvado,  por  esta    ocurrencia.   Los   pueblos 
deben  estar  siempre  atentos  á  la  conservación  de  sns  intereses 
y  derechos ;  y  no  deben  fiar  sino  de  si  mismo.    El  extrangero 
310   viene   á  nuestro  pais  á  trabajar  en  nuestro    bien  ,  sino    á 
íacar  quaotas  ventajas  pueda   proporcionarse.  Recibámoslo  en 
hora  buena,  aprendimos  las  mejoras  de  su  cihilizacion  ,  acepte- 
mos las  obras  de  su  industria,  y  franqueémosle  ios  frutos,  que- 
la  naturaleza   nos    reparte  á  minos  ilsnis;  pero  miremos   sus 
consejos  con  ia  mayor  reserva,  y  no  incurramos  en   el    error 
de  aquellos  pueblos   inoceiues,  que  se    dexaron  envolver  eri 
cadends,  en  medio  del  embelesamieoto,  que  les  habian  prcdiici- 
do    los  chichis  y  abalorios.  Aprendamos  de  nuestros  padres,  y 
cue   no  se  escriba  de  nosotros  lo  que  se  ha  escrito  de  los  ha- 
bitantes de  la  antigua  España  con  respecto  á  los  Cartagineses, 
^ue  la  dominaron. 

Libre,  feliz  España,  é  independente, 
Se  abrió  al  Cartaginés  incautamente: 
Vieronse  estos  traidores 
Fingirse  amigos,  para  ser  señores; 
Y  el  comercio  afectando, 
Enrrar   vendiendo   por  salir  mandando. 
Un  filosofo  moderno,  cuyos  talentos  formarán  siempre  el 
asombro  de  la  posteridad,  hnuentaba  el  abuso  de  las  luces  con 
que  los  euíopeos  habian   logrado   la  esclavitud    de   las  otras 
partes  del  mundo,  y  exaltada  su  fecunda  imaginación  por  los 
males ,  que  veía  venir  sobre  los  Hotentotes ,   á  la  sombra   del 
comercio,   con  que  los  holandeses  iban  á  provocarlos,  exclamó 
ante  los  hombres  de  letras,  que  leen  con  entusiasmo  sus  obras. 

-  ^'Huid  desdichados  Hotentotes,  huid ;  sepultaos  en  vues- 
»?  tros  bosques.  Las  bestias  feroces ,  que  los  habitan  ,  son  niv^nos 
^terrioles,  que  ios  monsíruos,  cuyo  imperio  os  amenaza-  El 
^j  tigre  podra  quiza  despedazaros;  pero  no  os  quitará  sino  la 
>)  víja  ;*aquel!os  os  arrebataran  la  libertad  y  la  inoc;.mcia.  Ó  si 
5j  conserváis  vuesuo  valor  ^  cu^aad  vuestros  arcos  ^  y  haced  caer 


..'.obre  los  extiangeros ,  que  se  o*  acerciii  una   liuvii  dl''ñ(i- 
.. chai  emponzoñadas.  ¡Que  no   qu^de  de  ellos  sino  uno' soló 
..para  llevar  el  escarmiento  de  sus  concijidadaiios  en  la  nueva 
..de  su  desastre ¡  ¡Peroah!    Vosotros  sois  demasiado  confia- 
..do$,  y  no  os  empeñáis  en  conocerlos.  Ellos  tienen  la  dulzura 
"^rTvi  f^"^  ^"  semblante;  su    Cüuversaciou  descubre  una 
..at.ibilidad,  que  os  impone;    ¿}  cómo  os  escaparíais   de   este 
«engaño,  quaado  es  un  lazo.en  que  caen   ellos   mismos?  La 
..  verdad  parece  habitar  sobre  sus  labios ;   á  el  acercarse  á    vó'. 
..sotros  inclinaran  la  cabeza,  pondrán   irna  mano   sobre  el  pe. 
..cho.  y  elevando  la  otra  hacia  los  cielos ,  os  la  ofrecerán  con 
..amistad  :  su  gesto  será  el  de  la  beneficencia  ,  sus  miradas  las 
..  de  la  humaniaad;  pero  la  crueldad  ,  y  ¡a  traición  habitan   en 
..suscorazones  perpetuamente.  Ellos  dispensarán  vuestras  ca- 
..  bañas,  se   apoderarán   de   vuestros   ganados  ,  corromperán 
..vuestras  mugeres,  y  seducirán  á  vuestras  hijas.  Sino  os  pre,- 
..tais  ciegamente  a  sus  locas  opiniones,  os  sacrificarán^  sin  pie- 
»  dad :  porque  creen  ,  que  no  merece  vivir   el  que  no   pienza 
«como  ellos  Apresuraos  pues,  emboscaos,  y  atrevesádles  el  pe- 
rcho, quando  se  inclinan  de  un  modo   pérfido  y  suplicante- 
"No  os  canséis  con  reclamaciones  de  justicia  ,  de  que  se  bur- 
»  an  ;  vuestras  flecnas  son  la.  íuúcas ,  que  harán  respetar  vues- 
tros derechos.  Ahora   es  tiempo;  Riebefc  se  aprSíma  ;  no 
..sera  este  quiza  tan  malo,  como  los  que  yo  pinto,  pero    s« 

»Y^voÍol1:"T""''"^  '""^'^*  P°^  '-  í-  le  Leda 
n:  7'°''^°''""«'««i''-^peos,„o  os  irritéis  con  mi   arenga- 

,  osof^ní         ''^''"^''^'''''■''='  «^"ci^arán.  Si  mi  discurso 

decetrí '  f  ^"'^"^  "°  '°^'  ma.  humanos  que  vuestros  pre^- 

..decesores;.  y  porque  veis  en  el  odio  que  os  profeso    el   oL 

» merecéis  de  los  demás  kombres."  pior>.,o,  el   que 

A  bordo  de  la   Fragata  d,  S.   M.  B.   Forcupin,. 
^^onos-Ayres  7  de  Setiembre  dt  18 1». 

Xf,     vj  EXCMO.  SEÑOR. 


^^¡«¿i*  jaigTTvr 


Las  razones  expuestas  en  él ,  para  probarme  que  debía 
tomar  una,  parte  activa  en  repeler  por  la  fuerza  elbloqueo  de 
esta  ciudad,  por  Montevideo/ no  fueron  smfíi-ieñtes  para-qu'é 
me  decidiese.  De  'consiguiente  creí  oportuno  conferenciar 
personalmente  con  el  gobierno  de  Montevideo,  para  mantener 
si  fuese  posible,  la  tranquilidad  en  esre  Rio,  hi  independencia 
del  comercio  británico ,  y  la  neutralidad  que  habia  í^sueltd 
observar,  / 

A  mi  llegada  á  aquella  ciudad  me  hallé  incitado  por  el  Go- 
bernador ,  y  por  el  Comandante  de  Marina ,  á  tomar  una  pat» 
te  activa  en  el  bloqueo  de  este  puerto,  y  en  caso  de  no  acó- 
inodarme  á  éste,  á  retirar  mis  fuerzas ,  y  permitir  a  la  marina 
.española  que  llevase  á  efecto  el  bloqueo ,  dexando  al  mismo 
tiempo  abierto  el  puerto  de  .Montevideo  de  un  modo  yQnta,' 
josoal  cpmer(?jo  t>ritinico,    ^  .  r  -  íbo  ^ul^» 

El  gobierna  de  Montevideo  indicó  como  nio ti vo  para  el 
bloqueo  d^  este  puerto;  que  V.  E.  babia  mandado  cortar  toda 
cornunicacion  ^on  aquella  ciudad ,  y  que  ningunos  efectos  pu- 
diesen iiiíjoducirse  procedentes  de  Montevideo,  sin  que  pa- 
gasen aquí  todo  el  derecho  de  entrada. 

Después  de  distintas  conferencias  con  el  gobierno  de  Mon- 
tevideo conocí /que  era'imposible.disuadirlo,  y  teniendo  fua- 
damento  para  creer  que  V.  E.  habia  igualmente  resuelto  no 
abrir  ja  comunicación,  creí  necesario  y  coníorme  á  la  neutra- 
lidad, que  me  habia  propuesto  mantener,  resolver  lo  siguiente. 
,      Que  tpdq  buque  británico  que  estubiese  en  este  puerto  y 
en  el  de  Montevideo  el  3  del  corriente,  quedase  expedito  para 
cargar  j  descargar  ,  hacerse  á  la  vela  ,  o  salir  de  qualquiera  dé' 
djcho^  puertos ,  como  creyese  conveniente,  sin  que  se  le  mo- 
lestare iii  pusiese  inipedim en to  alguno ;  y  qtoe  tíodb  buque  bri- 
téaico y  que  llegase  á  este  Rio  después  del  3. del  corriente,  6 
á  qualquier  de  los  dos  puertos  expresados,  no  pudiese  desear  - 
gar  sin  ir  á  Maldonado,  y  allí  ponerse  á  las  órdenes  del  co  • 
^nandante  de  S.M.B-,  ó  de  Ib  contrario  marcharse  del  Rio  de  k 
Placa,  cuya  orden  deberá  cumplirse,  hasta  que  tenga  ulteriores 
instrucciones  con  respecto  á  ellos  del  comandante  en  xefe  de  las 
fuerzas  de  S.M,B.  en  la  costa  del  Brasil,  ó  hasta  que  las  desave- 
nanvias  $ntre  iás  ciudades  de  Buenos-Ayrés  y  Montevideo  se 


hayan  ajustaJo,  con  tal  que  ninguna  ele  las  dos  ciudades  cause 
una  interrupción    en   mi   neutralidad. 

.  Por  esta  decisión,  espero  evitar  toda  intervención  política; 
y  como  la  suspensión  del  comercio  ha  de  ser  de  corta  duración, 
y  las  incomodidades,  que  de  consiguiente  ha  de  causar  á  mis 
conciudadanos  de  poca  importancia  ,  considero  que  es  de  mi 
obligación  separar  por  este  camino  mis  auxilios  de  los  Gobier- 
nos desavenidos. 

He  dispuesto  que  la  Misletoe  mandada  por  el  teniente 
Pvampsay  se  disponga  á  hacerse  á  la  vela,  y  daré  inmediata- 
mente cuenta  de  esta  conducta  á  mi  comandante  en  la  costa 
delBiasil,  por  cuya  ocasión  tendré  particular  satisfaccioü  de 
dirigir  los  pliegos  que  V.  £.  guste. 

Tengo  el  honor  de  ser  de  V^.  E.  su  humilde  servidor.= 

il.+  ii///o/.=A  la  Excma.  Junta  Provisional  de  Buenos  Ayres. 
»■ 

ultima  contíístacmi  ds  la  Junta. 

Ha  recibido  esta  Junta  el  oficio  de  Vd.  en  que  por  ultimo 
resultado  de  sus  comunicaciones  con  el  gobierno  de  Monte- 
video, reconoce  el  bloqueo  de  este  puerto,  haciendo  que  des- 
de, el  día  tres  adelante  los  buques  níercantes  ingleses  corten 
sus  negociaciones,  manteniéndose  en  Makionado  sin  importar 
sus  efectos,  ni  exportar  nuestros  frutos  hasta  las  resultas  dei 
Almirante  residente  en  el   Brasil,   á  quien  Vd.  dá  parte. 

ia  positiva  contradicción  que  se   advierte  entre  esta  con- 
ducta,^ y  la    que  guarda  el   Ministro  de  S.  M.    B.  residente 
en  el  Brasil  en  sus  oficios  á  la  Junta,  dexan  á  ésta  indecisa,  sin 
poder  conciliar  la  sinceridad  de  aquellas  ofertas  con  la   ieí^a-- 
lidad  del  procedimiento  que  Vd."  ha  adoptado.   La  Júñta'no^ 
otorga  su   consentimiento    a     una    medida  ^    cuyos   resuha- 
dos   podrán   ser     algún   dia   desagradables,    pues  siendo    Vd. 
solo  el  autor  de  la  interrupción   que  el  comercio  ingles    va  á 
sufrir,   Vd.  solo  responderá  á  su   nación  de  ios  sucesivos  em- 
b..ira2os,  que  serán  indispensables  para  reponer    iatégrameote.í' 
las  relaciones  mercantiles,  que  la  Junta  se  habia  empeñado  en   ' 
cimentar^  baxx)  los  principios  mas   liberales.    Setiembre    8  de 
lSio.=:Sr-   Comandante  Eiliot. 


«■V 


2  5^ 

Eírcarts  c:3cnt&  da  Memloza  bu  fecha  8. de!  cornéate, -ge  comimica 

la  siguieaté  noticia. 
Apreciafeíe  amigo  :  aunque  .10  he  tenido  h.  natisfaccicn  de  tereer  letra 
sni'a  eu  esto  correo,  n»  quiero  perder  5a  ^ocasioa  de  comumcaríanuc  tube 
de  Cnue  por  nna  carta  y  que  hoy  ía  confirma  O.  Matías  ü.andibaras, 
que  ncabii  de  ilyg.ir  de  Chile ,  qu^en  dice  ,  que  en  un  b^irco  q«e  arribe»  4 
i^aqwjín,.,i  ,  ge  dixo ,  que  Lusa  quedaba  feímeistado ,  y  que  «íl  Sr  \bascal 
q-aeduha  denuesto  ,  por  haber  apresado  muchos  QHíe  pretendían  el  sistein* 

^  Ya  f^ahrá  Vd.  que  Chile  ha  tenido  5a  grare  frs^ilidad  de  jurar  e\  Co» 
sejo  por  meras  rjoticsas;  pero  sepa  también  qae  Concepción  de  Penco  ot 
fia  reconocido  Consejfvni  rcconuce  ya  á  su  capiíal  por  lo  mismo.  Ten^o  I» 
sa^iKÍaccion,  que  qiiienes  dirigen  las  oneraciones  de  PenCo ,  son  O.  Juan 
Kosas,  Y  D.  Ignacio  Godo j,  mendocinos,  que  según  he  visto  en  sui 
ilictadüs  no; discrepan  de  nues'fros  sentimientos     Síc. 

Esincreibk  el  esfuerzo  qac  t).  Manue!  írigo^eo,*?  él  ñato  Lascanóha. 
cen  c^jntra  <a  Junta  de  Buenos. Ajres  ;  pero  t.  al  mismo  tiempo  muy  gratip 
de^l  desprecio  con  que  los  nobles  ckilenos  rairan   á  enemigos  ran  ridiculos. 

Nin-A.  bA  ñato  Ljscano  es  hijo  de  Bjenos-Ay  res  í  su  alimón  a  ha  hechov 
du^dr  a  muchos  ,  si  aí  tiempo  de  su  ariimacio^i  se  divertía  la  naturaleza 
en  estar  fo nnando  un  gato  :  su  espíritu  corresponde  á  su  cara,  y  sn  i?us- 
tracion  es  bien  cari<.x^ida  en  e^ta  ciudad.  Hizo  una  oposición  á  la  Cat^dr» 
de  lulosohj.,  y  cotilo  f.ié  pr'.ci^o  híblar  en  íatin,  muso  a  los  estudiauíei 
en  ía  necesKl  id    le  h-ic-r  «mi  fiesta  de  desagrados  4   Neb  ixi. 

Razón    de   los    Donativos    y    Préstamos  hechos   nueVameníe  en  la    Cía. 
«ad.de  Mendoza   á  f-iYor  de    ia    Kxiíodicion   que   marchó    á   la    Capital. 
despee»  de    los   que    se  dieron   parte   á   la    Kxcma.  Jun-a. 
Lí    F.sca!   de    Real    H  iciendi  Dr.  D.  J  ,5é      D>nittTos.  Prestamos.  Total, 

Aí'istin  (le  S;>t()míy.)r    54  ps,    2   rs,  en 

eíeivo,  y  17  ps.  6  rs.  que  le  son  deudores 

#oí»  soldados  ^oluníano^  de  la  expedición 

«ej;ün  consta  del    recibo    del  comand  nte 

de  dicha  expedición  D.  José.de  Suso. 
El    ?<evt'rendo   Padre    Prior  del  Co¡iiren*tó 

ée   Ni  P.  S.    Agustín 

B.   Ángel     aicardea    2Q0  e  carai^elafc  bh^nl 

<?cis  de  riiuade    seda  pan  ios  ¿00  v,obia- 

tarios  de  iaeí  pedición  D.Fraocisco  Silva,  loO  100 

n        rj^  ,  Totales....      122  joo  5¿2 

Real  Tesorena  de  Mendoza,  6  de  Setiembre  de  1810.—  Alexo  Nazarre. 

Los  emníeados    en   U    Tesorería  de   Real   Hacienda  y   Administración 
G.'ueral   de   la    Real   Rejifa   de   Tabacos  de   la  Ciudad  de  Santa    F¿  han 
rernifíüo    por   dorí.ttivo    15i    ps,    corrienres  a  saber. 

D.'  Rafael    Miifíinez     Miniííiro.  Contado'r  23. 
D.    Pedro    Antonio   de  Cehc^llo^  ,   Minisero     Tesorero   ^5 
D.    Mif^md    l^ri^ciü.do  .VL¿uei¿jün2eu^,.  oüoíal  du  ia   iVoren*  de  Reat 
Mac4üi¿aa  tf« 


P».     Rs.     Píi.     Rs. 

102 
20 


«O 


a   FrancJsco   Antonio  de  Quintana  ,  contador  sostííuíc  de  Í£  Real^lL. 

^  xlbaLfs!'"'*'  ^'^'"•"^   "*"   ^"°'°'*'   "'^"•^^   ^"^  '*  Confadum   d^ 

D.    Joan  infantf.,    fie!    de  Almacenes  y   Tercena    ?5. 

ü.   Francisco    Kaner  d.   K.,bina,   Visitador  del   Resguardo  %0. 

li.    JiKin    FraucMco   Morcillo.,  Teniente   Visitador  8 

i>eí»end.ente.  j).   Mar¡a.io   Picdrabuena ,  D.    Vicente    Gomet ,    O    J«« 

Ademas    ponen   a   disposición  de  la  Excma  Junfa  «¡n.   r.o«  «         •  • 

"^-t"  J   ^^  /«y    cantidades   y   especies   que    se  han   ofertadt 
for  donativo ^ara  la  expeMdon  de  mil  de  las  ProvincUV 

interiores  y  d  saber. 

jElegimtento  Real   de  Artilleria   Tolante  de  Bnenos»Ayr«i 

/-          ,         .  *^^- 

>  L  omandante  interino.  n    T..]:o«  n     u 

n    ríí»rn.',¿^    c    VI  '"•  Li»  Julián  Corbera o 

Jl/.    ijernaoe  de  S,  Viarr.n.  .  30      v\    n  r  , * 

Sargento  inayor   interino  n    t  i     x  r. "^ 

r\     Vf.n.ri    o     ^         "«itrino  JJ.  Juan  José  Ferrer 

JJ.    Manuel    Ramírez .  «a     rk     1  r»      *  *'"j^'  • * . 

,    Anudante. 30     D.   Ju.DRan>o„R„,a...... 

D.  P,  <1ro  R.gala¿„  de  .a  Plaza.     TO    b.  J...é  Bas^'"""'"- 

^  a'iV!.  /'T'í '°  O.  Francisco  villa;.;;;;  •  ■  •  •  !^ 

Alférez   de   Bandera.  n    r?u^:«   '7   /•  '*" 'y ^ 2(1 

L\    Anronio    Runirez..  10      *?•  V"''^;'' ^"'^^*^^»> ^O 

Capiia.es    Pr^meVo;.* "  ^'  ^^*^    ^''"^? 20 

D.    M;nael    Pmto ^O     n    M         ,  /^^^«"^^ces. 

T>    Tor¡h!«   rK  I  A^.  Mannei  Navarro  ir» 

D.    Juan    Forr.a^uera.  «O     Jí*  ^'^  ^i*'"'"^"  í^  n.'os. . . .      10 

D.  Bernardo  An.caat.W¡ Íq      ^   "J ''*"   ^^^.^ñguei  Andrade.      30 

"^    xw     U.   Juan   Balaguer jq 


Ps. 


90 

20 

20 


Capitanes    Sp^ruados. 
D.  Benito  Martinei 20 


IX  Asítonio  Giles \\'     jo 

D,  Benito  Melendez  .  .*.".  ,'  * .' ,'       ^ 


Total. 


426 


V  ?;'t"'*%'^^'^'  ^^  ^"  Setiembre  de  1810 
V.ti.  ban  Martin.— viaiMí  1  Kamiree 

gí  los  en  d.ch»  íf.>,M¿íu  uur  J  "|'V  ^  ^^^^'^ '  ^e  los   sulJos    deven- 
eefa  Olazaüai  4ü  ^g.      *^  '  ^  *  "*^^^^«  ^"^  su  esposa  D.  Jo- 


í>s   dcTengados   en 


^?![".y:'^.' 


..t''     '  ^ 


!■«■! 


2<8 

'^'^    -  Capitanes. 


Agiístiii  José  Sosn, cede  de  sus  pagas  vencidas  en  eí  presente  aooáOps^ 
José  Andrés  Bastos,  de  sus  pagas    deven^^adas  en  el   presente   año-^ 

y^Ae  por  sí ,  y  á  Rombre  de  su  esposa  Gonzála  Romero  SO  ps. 
Nicolás  Cabrera  cede.<íe  siis  pagas  del  presente  año  W  ps.  X-  ,Cl 

Lorenzo  Espinosa  gedc?  ía  paga  que  dice   deberlo  la    Real   FíacienJa  " 
del  mes  de  febrero.de  8Q3  del  sueldo  de  teniente  en  el  tiempo    que 
estubo  en  la  Caloaia,,  por  sí  ,   j^.su  muger  Antonia  Revio  va. 
Juan  Loy  TaboMa  cedie  la  paga  deteniente  qíie.  dice  debérsele  del 
mes   de  janlo  de   807  que   estubo  á  las  ordeaes  del   Ooronel    D. 
Franeisco  Xavier  Eiio  ¡efpr.  la  Baada  OHental .  n¿rA'}   ssir^íA 

Mateo  Silva  cede  de  sus  pagas  vencidas  en  él  présente  año  10  pi,  '  * 
Adán  de  Silva  Texejra  cede  desús  pag-as  vencidas  en  eí  presencie  ana 
8  pesos.     Mlmuei  Espinosa  por  sí ,  y  sii  esposa  Maria  Victoriana 
cede  20  ps.  de  sus  pagas  vencidas  en  el  presente  año. 

Ayudantes   Mayores* 
Inocencio  Pesoa 'cedé  de  sus  pagas  vencidas  en  el  pfeserite  'ano  10  ps.   ^ 
Pedro  Josáv?»íitosdfe^n  paga  del  presente  año  cedo  10  id.i»t>^^«'  «¿^ 

-      -Tenientes^  .  ' 

Hilario  Baldivia  de  su  haber  vencido  en  el  corrieníe  año  8  prsos. 
Casimiro  Mendoza  de  sus  pagas  vencidas  e/i  el  presente  aiío  b  ps. 
José  MariaSanjnartin  cede  de  sus  pagas  vencidas  en  el  presente  abo  6ps 
Laureano  Gamez  de  las  pagas  que  dice  le  adeuda  la  RealiiacieDda, 
de  los  mfsés  de  abril  y  rnaya  de  1809:  poj*  sí,' y  a  aombre  de  síi  3 
esposa  María  Ánacleía  González  cede  32  ps.'  .(>,;«.•: 

.  ■' :     Subtenientes^      -     -  líVíaif    M 

Eustaquio  Sosa  cede  dé  las  pagas  vencidas  en  el  presente  año  10  p»* 
Miguel  Ruiz  del  haber  de  dicho  tiempo  4  ps^ 
Mariano  Sa rio  id.  como  los  anteriores  12  ps.  .  ^ 

Bernardo  Pintos  id.  6  ps.    -      ■    Estanislao  Torres  id.  6  fd.'^'    ' .  r     >» 
Antonia  l'^idela  cede  de  los  haberes  de?l*pressate  año  8  ps,  i    '<I 

José  Dionisio  Gamboa  id.  cómo 'él  anterior  6  ps.     ^ 
Alltel  Rodríguez  id.  6  ps,       . .    ^^      >.  ., 

Estanislao  Rox as  cede  dé  las  pagas  de  dicho  tiempo  5  ps. 
José  Antonio  García  délas  pagas  de  sargento  vencidas    en   el   cor- 
riente año  4  ps, 
Ei^argerltr  garzón  graduado  de  subteniente  cede  la  pigá  del  raes  de 

fanio  dé '807  éh  que  se  hallo  eii  La  Banda  Oriental, 
Doña  María  'Cipriana  Sosa  natural   y    vecina   de    la    Eisenada    ea 
prueba  de  su  adhesión  á  el  nuevo  gobierno  ,  y  por  un    rasaro    de 
graíita  1  á  las  medidas  tomadas  para  el  engrandecimiento  del  Puer- 
to de  íi  Eiisena  la  ,  ha 'donada  una  quadra  de  sus   terrenos,    para 
que  se  ievantea  eí\  ellos  los  quarteles  ,   que  ya  están   delineidos. 
D.  .fose  de  (Jribnru  vecino  de  la  ciudad  de  Salta  después   dá  nnni- 
fesíar  su  mas  sincera  adhesión  a  la  Junta,  ofrece  pagar  6  solJ^duf 
€11  la  expt'dicioíi  á  nombre  de  6  hijos  meaores  que  tiene. 


ConVvuan  loa  donativos  de  cñhatlof;.' 
El  aTcaldo  D.José  Antonio  Benjtes.  4     Juan  líipoüto  Duarte 
E[  cura  vicario  Dr.  O.Juan  Ma- 

fiiiel  Fcrnaiidc?,  de  Agiicro  por 

ahora  di«. 
El  tenicnto  cura    D.  Dionisio  Mi- 

ÍJán  ofitíc>ó  y  entregará  quatro 

lo  mas  Ibreye  posible,    ■ 
D.    Francisco   Esquive!. 
jy.   Juan    Bautista  Burgos, 
D.    José  Barragan^ 
D.  Antonio  Rodriguez  Veron. 
D,    José  del  V'^alle, 
D.    José   Ignacio  Lalinde» 
D.;  Juan  Rosa   Sosa. 
D.  Justo   Toledo, 
D. .  Manuel  Torres, 
P.  José  Benito  Riyas  ,   ofreció  y 
entregará  á  los  pocos  días  quatro, 
D.  Miguel  Ceryantes, 


259 


D.  Dionisio   Zamiidio. 

D.  José  Santos  Correa, 

D.  Frg,ncisco  Sosa, 

P.  Juan   José  Grimaldi, 

P.  Dionisio  Baez* 

P.  Silyestre  Correa. 

P.  Teodoro  Correa. 

Juan  Agustín  Zarate» 

Fernando    Zarate, 

P.  José  Ramón  Acosta, 

Margarita  Zayala,  parda  yiuda 

P.    Gerrgsio  Ballesteros, 

P.  Nicolás  Ballesteros, 

P.  Juan  Rosa  Peralta, 

Tomás  Cascallares,      ' 

P.  José  Foríete.  " 

P.    Nicoiás  Cordero, 

Tadeo   Morales  ,   pardo, 

P.  tibaldo   Gómez. 

Pionisio  Órelíana. 

Juan  Arias. 

Ventura  Sena 


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Fasqual    Gómez. 

Soriano    Aguilera. 

Felipe  Antonio  AWarado, 

Martín  Costilla. 

José  Bustos. 

AJexo  Cabilla. 

Juan  Antonio  Malucnde, 

Juan  Andrés  Aramallo. 

Juan  Almaraz. 

José  Miguel  Valor, 

Juan    Morales, 

José   Aniceto  IIoTtigosa^ 

Ramón  Medina. 

Miguel'  Peralta, 

Felipe  Pando, 

María   Morales. 
José  Gregorio  Peña, 
Martin  LeguisamoD. 
3     Pedro  Fab  1  ó  Mo v an o» 
3     Veritürá   Vaflaáares. 
José  Valladares, 
Gregorio    Rodríguez. 
P.   Cruz  Reynosp, 
Basilio  Santos  de  Ja  Tor-re» 
AlexQ  Santos  de  la  Torre.  ° 
GregoiííQ,  Carreras,     " 
Juanea  Orellano.      '   , 
Antoíiío  Viilarroeí. 
Antonio  Chaves. 
Domingo  Pal íero, 
Pedro   Máldonad©,     '    ' 
Ignacio  Medina. 
Migue!  Silva,. 
Pasquaía   Viílega^, 
D,  Juan  Almada. 
P.  Rafael  Zamudio, 
Anselmo   Valladares» 
Francisco^  ViUanuéva, 
Antonio  Tprriilas, 


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