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Full text of "La cocinera poblana : y el libro de las familias : novísimo manual práctico de cocina española, francesa, inglesa y mexicana, higiene y economía doméstica : contiene mas de dos mil fórmulas de ejecucion sencilla y facil : tratados especiales de pasteleria, confiteria y reposteria diversas recetas y secretos de tocador y medicina domestica para conservar la salud y prolongar la vida"

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COCINERA  POBLANA 


Y  EL 


LIBIDO  DE  LAS  FAMILIAS 


KutUíwo  bmuumü  yráctloo  de  cocina  «'imitóla. 
ítmioma.  Ínsito»  j  nexiouia,  higiene  y  erunuiula  domottlc» 


Contiene  mas  de  dos  mil  fórmulas  de  ejecución 

sencilla  y  fácil 

Tratados  especia/es  de  Pastelería,  Confitaría  y  Repostería 
diversas  recetas  y  secretos  ds  tocador  y  medicina  domestica  para  conservar 

la  salud  y  pi  olongaw  la  vida. 


CUARTA  EDICIÓN  CORREGIDA  Y  AUMENTADA 


TOMO  I 


MÉXICO 


TIPOGRAFÍA  de  ángel  bassols  y  hermanos 

14  Avenida  Oriente,  mimero  147 

Svgmida  A»  McmmjCN  niputro  <t 

1890 


ES  PROPIEDAD  DE  LOS  EDITORES  A.  BASSOLS  T 

HERMANOS 


c 


b+- 


PMMEBA  A       ETENOIA 


+•+ 


a  acogida  que  ha  tenido  la  presente 
obra,  nos  convence  de  su  utilidad  y  nos  re* 
suelve  á  publicar  esta  tercera  edición. 

Los  libros  de  cocina  que  conocemos,  sue- 
len abundar  cu  recetas  que  no  tienen  aquí 
aplicación.  La  persona  que  ha  reformado  la 
obra  que  lleva  el  título  de:  Libro  de  las  fa- 
milias, es  una  cocinera  práctica,  que  al  de- 
sechar de  esa  obra  lo  que  considera  de  poca 
ó  ninguna  aplicación  entre  nosotros,  lo  suple 
con  guisos  exquisitos  y  probados  durante  mu- 
chos años  con  buen  éxito. 

Todo  lo  demás  que  contiene  el  libro  es  im- 
portante para  una  familia,  y  por  esta  razón 
creemos  que  continuará  siendo  buscada  con 
empeño  la  Cocinera  Poblana. 


6 


6EBTOBA  ADVERT  BNOIA 


~|¿ara  que  se  pueda  señalar  con  exactitud 
cualquiera  receta;  laa ¡ponemos  por  orden  nu- 
mérico, lo  que  facilitará  sin  duda  la  recomen- 
dación: que  quiera  hacerse  de  cualquiera  de 
ellas,  pues  bastará' con  citar  el  número  para 
np'perdeT  el  tiempo  buscando. 


ThhHtytty  Ummot  h  «xfaft. 


1 1 «e»  1 1 


ABARBETAR.— Es  pasar  un  mecatillo  á  fin  de  retener 
los  miembros  de  una  ave. 

ADEREZAR. — Llámase  aderezar  la  carne,  quitarla  piel, 
los  nervios  y  las  gorduras  superfinas. 

APERDIGAR. — Poner  la  carne,  las  legumbres  6  las  fru- 
tas en  agua  hirviendo  durante  algunos  instantes,  después 
de  lo  cual  sé  saca  y  se  pone  en  agua  fresca. 

BAÑAR. — Se  hace  bañar  la  carne  para  quitarle  la  sangre 
que  contenga  y  hacerla  mas  blanda.  Este  medio  consiste  en 
ponerla  en  remojo  por  espacio  de  una  hora  6  menos  tiempo, 
en  una  cacerola  llena  de  agua  fría. 

BAÑO  MARÍA. — Se  dice  de  la  carne  ú  otras  sustancias 
que  se  hacen  cocer  en  una  cacerolita  bañada  en  agua  hir- 
viendo, á  fin  de  que  no  experimenten  la  acción  inmediata 
del  fuegí,  que  las  quemaría  ó  cocería  demasiado  aprisa. 

CALAR. — Hacer  empapar  por  mucho  tiempo  la  sopa. 

DESHUESAR.  —Es  quitar  los  huesos  de  las  aves  6  pie- 
zas de  caza,  y  también  las  espinas  de  los  pescados.  Esta 
operación  exige  mucho  cuidado  y  gran  práctica. 

EMPANAR. — Echar  pan  rallado  ó  migas  pequeñitas  de 
pan  sobre  la  carne  asada  ú  otras  cosas  que  se  hacen  cocer  á 
Jas  parrillas  ó  al  horno. 


8 

ENLARDAR — Cortar  pedacitos  muy  delgados  de  largo 
y  sujetarlos  oon  un  mecatillo  en  el  vientre  y  espalda  de  las 
aves  que  se  ponen  al  asador. 

ESCABECHAR.— Poner  la  carne  ó  el  pescado  en  una 
preparación,  para  darle  gusto  6  para  conservarlos. 

ESCALDAR — Bañar  en  agua  muy  caliente  un  animal 
del  cual  se  quieren  quitar  las  plumas  6  pelo. 

EXPRIMIR — Apretar  una  fruta  para  hacer  salir  el  jugo. 

ESTOFAR — Hacer  cocer  la  carne  en  un  puchero  muy 
bien,  tapado  para  impedir  la  evaporación. 

LARDEAR — Poner  en  el  fondo  de  una  cacerola  algunas 
tajaditas  de  jamón  ó  tocino,  ó  bien  algunas  hojitas  de  lardo. 

MACERAR — Es  ablandar,  enternecer  alguna  cosa  á  gol- 
pes ó  por  medio  de  algún  lioor.  Poner  en  una  infusión  fria 
6  en  un  liquido  alguna  sustancia  cuyos  principios  se  quie- 
ran extraer. 

MAJAR. — Es  triturar  6  dividir  groseramente  en  el  me- 
tate 6  por  cualquier  otro  medio. 

MANGA. — Pedazo  de  lana  de  un  tejido  tramado  que  se 
cose  en  forma  de  cono;  la  parte  superior  se  fija  en  un  peque- 
ño cerco,  en  el  que  se  pone  un  mango.  Se  pasan  toda  clase 
de  líquidos  con  esta  especie  de*  embudo  de  filtro. 

MECHAR. — Introducir  mechas  de.  tocino  gordo  en  la 
carne  de  las  aves  ú  otras  viandas  que  se  han  de  asar  ó  om- 
papar.  Conviene  que  siempre  se  meche  en  el  sentido  inver- 
so del  hilo  de  la  carne,  á  fin.  de  que  al  trincharla  se  corten 
las  Ion j  i  tas  al  través  de  aquella. 

PREPARAR — Ponerá  punto  las  carnes  de  los  animales 
6  aves  para  guisarlas;  darlas  aquella  forma  que  mas  conve- 
niente 


o 

RAMTTO. — Se  dice  del  perejil  6  cebollita  que  se  ata  en 
forma  de  lio  y  que  se  pone  en  los  guisados  para  darles  ma- 
yor sabor.  Llámase  ramito  cvmpuaio  al  que  ademas  del  pe- 
rejil y  la  cebollita,  tiene  tomillo,  albahaca,  laurel  y  un  gra- 
no de  clavo. 

REBOZAR. — Extender  6  derramar  sobre  las  carnes  ó* 
aves  trinchadas,  calientes  y  dispuestas  para  el  servicio,  las 
salsas  ó*  jugos  reducidos  á  una  consistencia  bastante  espesa, 
llamada  rtltozo.  Empléase  con  el  auxilio  de  una  pluma.  En 
repostería  es  hacer  una  costra  de  azúcar  sobre  las  frutas  ó 
pasteles. 

REHOGAR. —Cocer  á  fuego  lento. 

¡SALTAR. — Se  llama  en  cocina  guisado  saltado  al  que 
puesto  en  la  cacerola  se  le  hace  dar  saltos  á  la  mano. 

SAZONAR. — Hacer  sazonar  es  dar  un  baño  de  manteca 
á  la  carne,  aves  ó*  caza  que  se  quiera  poner  un  poco  blanda. 

SOASAR — Medio  asar  6  asar  ligeramente,  tomado  en  el 
sentido  propio,  y  también  poner  las  aves  6  caza  en  una  ca- 
cerola al  fuego  y  darles  vueltas  hasta  que  la  carne  se  hinche 
un  poco. 

SOFLAMAR — Es  hacer  pasar  las  aves  6  caza  de  pluma 
por  un  fuego  claro  6  de  llamas,  para  que  se  queme  el  pelo  ó 
plumas  pequeñitas  que  pueden  haber  quedado. 

TAMIZ. — Es  un  pedazo  de  lana  que  sirve  para  pasar  los  . 
jugos,  etc.  Se  suple  por  medio  de  un  lienzo  humedecido. 
Llámase  también  del  mismo  modo  un  instrumento  de  coci- 
na, especie  de  cedazo  de  seda  6  cerdas,  por  el  cual  se  pasa 
6  cierne  el  caldo  6  salsas  para  limpiarlas  de  los  huesos  me- 
nudos 6  espuma. 


9AMFI  9R1KBRA 


ECONO/VIÍA     DOMÉSTICA 


Sopas,  caldos  y  jugos 

1.  Sopa  de  pan. — En  una  topera  proporcionada  se  cortan 
cortezas  de  pan  secas  6  tostadas,  pero  no  quemadas,  y  se 
les  echa  por  encima  caldo  que  baste  para  remojarlas,  y  a) 
tiempo  de  servirla  se  les  echa  otro  poco  de  caldo  bien  ca- 
liente, cubriéndola  de  algunas  legumbres;  nunca  se  debe 
hacer  cocer  el  pan  en  el  caldo,  pues  esta  mala  costumbre  le 
quita  el  gusto. 

2.  Sopa  á  la  Juliana. — Se  toma  igual  cantidad  de  zana- 
horia, apio,  lechuga,  acederas,  chícharos  y  habas  tiernas, 
se  rehogan  en  manteca  con  unas  rodajas  de  cebolla,  se  echa 
después  caldo  del  puchero,  y  se  cuece  á  fuego  lento,  y  des- 
pués viértase  sobre  rebanadas  de  pan  muy  delgadas. 

3.  Otra  Jidiatia. — Se  frie  un  poco  de  ajo  picado,  y  cuan- 
do ya  está  bien  frito,  se  echa  en  la  misma  manteca  jitoma- 
te, cebolla,  nabo,  colinabo,  zanahoria,  ¿pió,  acelgas  y  le- 
chuga, todo  bien  picado,  y  ademas  chícharos  y  habas. 


12 

Guando  esto  está  bien  frito,  se  le  echa  bastante  caldo  de 
puchero,  pimienta,  clavo  y  sal.  Se  deja  cocer  bien  todo, 
y  al  mandarla  á  la  mesa  se  le  echan  rebanadas  de  pan  fritas 
en  manteca  á  que  den  un  ligero  hervor. 

4  Sopa  juliana  bearnexa. — So  hace  hervir  una  col  de 
mediano  tamaño  con  cuatro  lechugas,  y  so  dejan  escurrir  pa- 
ra ponerlas  luego  en  una  cacerola  con  rebanaditas  de  ja- 
món un  salchichón  y  dos  patas  de  guajolote,  6  cuatro  de 
gallina,  cociéndolo  todo  en  caldo  no  muy  salado,  al  que  se 
agrega  un  ramillete  de'perejil  y  dos  cebollas  picadas,  con  dos 
clavos.  Luego  se  escurren  el  jainon  y  las  legumbres,  sepa- 
radamente cada  cosa,  se  pasa  el  caldo  y  se  desgrasa  hasta 
que  queda  claro,  y  con  rebanadas  de  pan  delgado  se  hace 
una  corona  en  un  traste  hueco,  entremezclando  el  pan,  el 
jamón  y  las  legumbres,  todo  cortado  por  cuartos.  Se  llena 
el  medio  de  la  corona  oon  un  puré  cualquiera,  se  ponen  en- 
oima  las  patos  y  al  rededor  las  rebanadas  de  salchichón. 
Se  deja  todo  sobre  un  fuego  suave  y  se  sirve  con  el  caldo 
por  separado,  clarificado  y  lo  mas  caliente  posible. 

5.  Sopa  de  primavera, — Se  prepara  como  el  mim.  3,  aña- 
diendo espárragos  y  cebollas  pequeñas  escaldadas  de  ante- 
mano, y  rábanos  pequeños;  y  para  quitar  la  aspereza  de  es- 
tas legumbres  se  echa  un  poco  de  azúcar  en  el  caldo. 

6.  Sopa  dé  yerbas. — Córtense  en  ruedeeitas  largas  zana- 
horias, cebolla  y  nabos,  y  pónganse  á  freir  con  una  hoja  de 
lechuga  ó  escarola,  apio,  acederas  y  perifollo,  en  manteca 
ó  aceite,  y  so  cuece  todo  en  un  cuartillo  de  agua,  añadien- 
do 1a  sal,  y  cuando  se  haya  consumido  el  líquido  se  añade 
mas  agua,  dejándolo  cocer  un  por  de  horas;  se  sazona  oon 
dos  clavos  de  especia  y  un  poco  de  pimienta,  y  cuando  las 


13 

legumbres  estén  cocidas,  se  cuela  el  caldo  y  se  moja  la  so- 
pa, que  también  se  sirve  sin  colarla. 

7.  Sopa  á  la  jardinera, — Se  cortan  unas  tiritas  de  zanaho- 
rias y  nabos;  téngase  lechuga,  acedera  y  perifollo  picado,  y 
se  rehoga  todo  con  manteca  ó  aceite;  se  echa  después  caldo 
del  puchero,  echando  un  puñado  de  chícharos  y  algunas  ca- 
bezas de  espárragos,  y  luego  que  estén  estas  legumbres  bien 
cocidas,  se  espuman  y  se  echan  sobre  las  cortezas  de  pan. 

8.  Sopa  de  ajo. — Se  fríen  los  ajos  en  pedacitos  con  man- 
teca 6  aceite;  cuando  están  bien  fritos,  pero  no  quemados, 
se  echa  sal,  pimienta  y  después  la  cantidad  de  agua  necesa- 
ria, dejándola  hervir  medio  cuarto  de  hora;  si  se  quiere  ha- 
cer con  huevos,  se  echan  éstos  encima  de  las  rebanadas  de 
pan,  y  virtiendo  el  caldo  hirviendo  sobre  ellos,  quedarán 
muy  buenos. 

9.  Sopa  de  arroz. — Sr  debe  calcular  una  onza  por  perso- 
na si  es  de  buena  calidad;  después  de  lavado  en  agua  tibia 
tres  6  cuatro  veces,  frotándolo  con  las  manos,  se  pone  á  co- 
cer á  fuego  lento  con  caldo  de  cocido. 

10.  De  otro  modo. — Después  de  lavado  el  arroz  en  agua 
tibia,  se  cuece  á  fuego  lento  con  el  caldo  6  sustancia  de  car- 
ne; cuando  esté  cocido  se  le  quita  la  grasa  de  encima,  cui- 
dando de  que  no  quede  muy  líquido  ni  muy  espeso;  si  se 
quiere  que  esté  dorado  por  encima,  se  pone  una  tapadera 
con  ascuas  bien  encendidas.  En  día  de  vigilia  se  quebran- 
ta en  agua  muy  caliente,  se  le  echa  sal  y  aceite,  y  si  se  quie- 
re*puede  añadirse  sustancia  de  garbanzos,  chícharos,  len- 
tejas, etc. 

11.  Otro  modo. — Se  rehoga  con  manteca,  cebolla  y  un 
poco  de  jitomate,  y  después  se  echa  el  caldo  del  cocido,  y 


14 

■i  se  quiere  de  vigilia;  el  arroz  debe  cocerse  en  una  hora, 
apartándolo  un  poco  antas  de  estar  cocido,  para  servirlo 
medio  cuarto  de  hora  después. 

12.  Sopa  de  arroz  con  /«cae. — Después  de  bien  lavado  con 
agua  tibia,  se  hace  cocer  en  suficiente  cantidad  de  leche,  y  se 
sazona  con  sal  6  con  azúcar,  según  el  gusto  de  cada  uno,  sir- 
viéndolo al  momento;  hay  que  tener  cuidado  de  menearlo  á 
menudo;  también  puede  hacerse  con  leche  de  almendras,  pe- 
ro téngase  presente  que  se  necesita  un  cuarterón  de  almen- 
dras dulces  y  cuatro  almendras  amargas  para  hacer  media 
azumbre  de  leche. 

13.  ti9pa$  de  poda,  de  fécula,  témela  y  sahagú  á  la  españo- 
la.— Para  las  sopas  de  pasta  deberá  cuidarse  deque  el  caldo 
esté  hirviendo  al  tiempo  de  echarla  á  cocer.  Los  fideos  es- 
tán cocidos  al  segundo  hervor,  así  como  los  pececillos,  es- 
trellitas  y  demás  pastas  menudas;  en  cuanto  á  las  pastas 
gruesas,  como  macarronea,  tallarines,  etc.,  necesitan  mas 
tiempo,  y  debe  cuidarse  de  revolverlos  para  que  no  seagu- 
rullen  en  el  fondo.  Estas  últimas  se  sirven  generalmente 
con  queso  rallado.  Toda  sopa  de  pasta  debe  presentarse  en 
la  mesa  bastante  caldosa,  exceptuando  las  tostadas. 

La  sopa  de  sémola,  la  de  fécula  y  la  de  sahagú,  se  hacen 
lo  mismo. 

14.  Sopa  de  macarrones. — Se  mojan  tres  libras  de  terne- 
ra, y  se  mecha  con  clavo,  canela,  jamón  y  ajos  enteros  re- 
volcados en  sal  pimienta.  Se  echa  en  la  cazuela  media  li- 
bra de  jamón  picado,  con  tres  ajos,  yervas  olorosas  y  pere- 
jil. Preparado  esto  se  pone  la  carne  á  fuego  manso,  y  se 
voltea  lo  mismo  que  el  jamón  para  que  se  cueza  bien.  Cuan- 
do el  jamón  está  derretido,  antes  que  se  queme  la  carne  se 


15 

echan  en  la  cazuela  doa  pocilios  de  agua  caliente,  y  al  con- 
sumirse, se  echa  caldo  de  la  olla  colado  y  luego  los  maca- 
rrones, que  han  de  estar  cocidos  en  agua  hirviendo,  y  se  de- 
jan un  rato  dentro  del  caldo  para  que  espese  un  poca  Una 
▼es  que  está,  se  ponen  en  el  platón  y  se  cubren  con  queso 
rallado. 

15.  Sopa  de  macarrones,  á  la  italiana.  — Se  toma  media 
libra  de  queso  de  Gruyere,  del  oual  se  ralla  la  mitad,  y  la 
otra  mitad  se  corta  en  pedazos  pequeños;  en  el  fondo  de 
una  cacerola  se  pone  una  ligera  capa  de  queso  rallado  y 
otra  de  macarrones,  encima  otra  de  pedacitos  do  queso,  lue- 
go otra  de  macarrones,  alternando  así  hasta  que  se  acabe  el 
queso;  se  echa  encima  caldo  de  pescado  6  de  carne,  y  si  es 
de  estofado,  mucho  mejor,  y  se  hace  cocer  hasta  que  el  cal- 
do se  consuma;  se  añade  entonóos  y  se  echan  algunas  espe- 
cias, procurando  servir  esta  sopa  con  poco  caldo  y  muy  es- 
peso. 

16.  Sopa  de  fideo*. — Hágase  hervir  caldo  del  puchero  6 
de  sustancias;  se  echan  los  fideos  después  de  haberlos  que- 
brantado para  que  no  se  apelmacen ;  la  cantidad  que  debe 
calcularse  es  una  onza  por  persona;  se  dejan  cocer  diez  mi- 
nutos lo  mas,  y  se  retiran  para  que  sigan  hirviendo  lenta- 
mente al  borde  de  la  lumbre,  cuidando  de  menearlos  á  me- 
nudo y  que  no  cuezan  demasiado. 

17.  Sopa  de  fideos  con  leche. — Se  cuece,  como  la  anterior, 
en  leche,  y  se  sazona  con  sal  6  azrfcar. 

Lo  mismo  se  hace  con  todas  las  demás  clases  de  pastas, 
excepto  que  unas  necesitan  mas  6  menos  tiempo  para  co- 
cerse. « 

18.  Sopa  de  fideos  y  pan. — Se  cortan  unas  rebanadas  de 


16 

pan  y  le  tuestan;  ie  apartan  unas  pocas  y  ae  fríen  en  man- 
teca,  así  onmo  los  fideos  para  que  se  doren,  y  se  quitan  de 
la  lumbre.  8e  fríen  dos  jitomates  maduros,  un  pooo  de  oe- 
bolla,  ajos  y  perejil,  y  se  fríe  el  ajo  primero  y  luego  lo  de- 
más. .  Ta  que  está  frito  se  le  echa  el  caldo  de  la  olla;  cuan- 
do ya  está  sazonado  se  baja  de  la  lumbro  y  on  otra  tortera 
se  ecban  los  fideos.  Se  cogen  unas  mollejas  de  pollo  y  unas 
criadillas,  se  cuece  y  se  nacen  unas  rebanadas  y  se  ponen 
encima  de  las  tostadas  que  no  están  fritas,  se  le  echa  el 
caldo  con  una  cucbara  y  se  pone  á  dos  fuegos  lentos.  Lue- 
go se  adorna  con  jamón,  rebanadas  de  huevo,  criadillas  y 
hojas  de  perejil,  advirtiendo  que  debe  quedar  algo  suelta. 

19.  Sopa  de  macarronea  con  queso, — Se  echan  en  el  caldo 
cuando  está  hirviendo  bien,  se  menean  y  espuman  conti- 
nuamente, dejándolos  oocer  un  cuarto  de  hora,  y  después 
se  retiran  dejándoles  hervir  á  fuego  lento  hasta  que  estén 
bien  cocidos;  antes  de  servirlos  se  les  echa  encima  ralladu- 
ras de  queso  de  Flándes  y  mitad  Qrwjére.  La  sopa  debe 
estar  espesa;  también  se  sirve  el  queso  rallado  en  plato,  y 
es  preferible.  Los  macarrones  están  muy  gustosos  cocidos 
con  caldo  de  estofado. 

20.  Sopa  de  rabióle». — A  una  libra  de  harina  se  le  echa 
un  huevo,  y  manteca  una  cucharadita,  dos  tantos  de  man- 
tequilla, una  poca  de  sal  y  agua  clara  y  se  amasa  bien  has- 
ta que  haga  ojos.  Entonóos  se  deja  reposar  un  poco,  se  ta- 
pa con  una  servilleta  y  después  se  extiende  con  un  palote 
para  hacer  los  rabióles  con  el  siguiente  relleno.  Espinacas 
6  acelgas  cocidas  que  se  fríen  oon  manteca,  mantequilla  y 
cebolla,  se  muele  un  poco  de  apio  y  se  le  echa  queso  ralla- 
do, si  no  hay  de  Flándes,  aunque  sea  afiejo,  todo  al  gusto. 


17 

Se  hacen  bolitas  que  se  van  poniendo  de  trecho  en  trecho 
en  una  capa  de  masa,  Be  tapan  con  otra  capa  y  ae  cortan 
con  una  carretilla,  dejándolos  liasta  el  dia  siguiente  que  se 
hace  la  sopa  con  caldo  de  puchero  sazonado,  como  otra  so- 
tu  <•  Malquiera  de  fideos,  pasando  antes  los  rabióles  por  una 
poca  de  manteca.  Así  que  están  en  caldo  se  les  eoha  un 
poco  de  apio  y  perejil  picado  y  otro  poco  por  encima. 

21.  Sopa  inglesa  de  rohioUs. — Se  pone  á  cocer  un  seso  y 
después  se  pica  muy  bien,  y  un  poco  de  cebolla,  perejil  y 
orégano,  se  fríe  todo  en  eceite  francos  y  mantequilla.  Ya 
que  está  dorada  la  cebolla  Be  echan  los  sesos  y  sardinas, 
quitadas  las  espinas  y  despedazadas,  una  poca  de  pimienta 
molida  y  queso  rallado,  y  cuando  todo  está  preparado  se  po- 
ne una  taza  grande  de  agua  en  una  cacerola  con  una  cucha- 
rada chica  de  aceite  francos  á  que  hierva.  La  misma  canti- 
dad de  harina  se  va  echando  poco  á  poco  para  que  no  se  haga 
bolas.  Así  que  está  un  poco  fría  se  le  incorporan  dos  hue- 
vos con  todo  y  clara  bien  batidos.  Para  ver  si  está  la  ma- 
sa se  toma  en  los  dedos  á  que  no  Be  pegue  y  se  hacen  las 
empanadas  del  tamaño  de  un  peso  y  delgaditas,  se  rellenan 
con  el  picadillo  dicho  á  que  queden  como  empanaditas  y  se 
ponen  á  orear  en  una  lata. 

22.  Sopa  de  rabióles. — Se  hace  la  masa  con  agua  de  azafrán, 
sal,  harina  y  un  poco  de  aceite  de  comer,  de  modo  que  que- 
de suave,  de  buen  sabor,  amarilla  y  suelta  para  palotearla. 
En  este  estado  se  extiende  con  el  palote  lo  mas  delgada  que 
se  pueda,  se  van  haciendo  bolitas  de  relleno  con  la  mitad 
de  la  masa,  y'  fc  otra  mitad  se  corta  con  un  cuchillo  6  car- 
retilla en  cuadrítos  que  so  tienden  en  unos  manteles,  te- 
niendo cuidado  de  voltearlos  á  las  dos  horas  para  que  no  se 

LA  OOOUTBBA  FOBLAJffJ. — TOM.  X. — 2. 


18 

peguen,  y  se  guardati  para  el  otro  día  que  se  ¡tasan  por 
manteca  para  que  se  doren.  Se  hace  el  caldillo  con  jitoma- 
te, ajo  y  cebolla,  todo  menudito,  se  le  echa  caldo  del  pu- 
chero, orégano  verde  y  seco,  perejil,  clavo,  canela  y  pimien- 
ta y  allí  se  echan  a  que  se  cueza.  £1  relleno  se  hace  con 
jitomate,  cebolla,  ajo,  acelgas  cocidas,  desvenadas  y  pica- 
das, seso*,  queso  en  polvo,  especias,  vinagre,  aceite,  sal  y 
un  pedacito  de  azúcar.  Al  servirlos  se  les  echa  vino  de  Je 
réz. 

23.  Sopa  de  harina  dé  papa. — Deslíanse  en  caldo  frío  (dos 
cucharadas  de  harina  por  persona),  échese  en  seguida  todo 
en  caldo  hirviendo,  meneándolo  continuamente,  y  déjese 
cocer  cinco  minutos. 

24.  Shpa  de  harina. — Se  coje  medio  de  harina,  se  pone 
una  cazuela  6  sartén  y  se  le  echa  una  taza  de  agua  y  medio 
de  mantequilla,  y  se  pone  á  hervir;  así  que  esté,  se  echa  en 
la  harina  y  se  meneará  muy  bien.  Luego  se  aparta  de  la 
lumbre  y  se  deja  enfriar,  echándole  cuatro  huevos  y  algu- 
na raspadura  de  nuez  moscada  y  al  caldo  de  gallina  ó*  de 
huevos,  se  le  echa  la  masa  con  una  cucharadita  poco  rato 
antes  de  comer. 

25.  Sopa  á  la  francesa. — Se  fríen  cortezas  de  pan  en  man- 
teca de  vaca  ó*  de  cerdo  hasta  que  estén  bien  doradas,  se 
hace  un  puré  de  chícharos  verdes,'  mójese  con  caldo  del 
puchero  hasta  que  esté  claro,  derrítase  también  en  ella  un 
pedazo  de  manteca,  también  de  vaca;  al  tiempo  de  servirla, 
añádase  un  poco  de  azúcar,  y  échese  sobre  las  cortezas  de 
pan  fritas;  el  puré  debe  estar  bien  en  sazón. 

*  26.  Otra  sopa  francesa. — Se  muele  lomo  de  ternera  de 
adentro  mezclándole  nuez  moscada,  pimienta  y  sal  en  pol- 


19 

vo.  Oon  esto  se  hacen  albondiguitas  del  tamaño  de  una  bo- 
la, ae  revuelcan  en  huevo  y  luego  en  harina,  echándolas  á 
cocer  en  agua  hirviendo  con  sal.  Se  fríe  aparte  bastante 
cebolla,  ajo  y  perejil,  todo  picado,  y  un  poco  de  harina. 
Encima  de  esto  se  echa  el  caldo  francés  y  las  albondiguitas, 
agregándole  unos  trocitos  de  pan  ó  arroz  cocido.  Las  al- 
bondiguitas se  pueden  cocer  también  en  el  mismo  caldo, 
pero  espumándolo  bien. 

27.  Sopa  de  acederas. — Póngase  en  una  cacerola  oon  man- 
teca un  puñado  de  acederas  mondadas  y  lavadas,  picadas  en 
pedazos,  y  cuando  están  bien  rehogadas,  se  añade  la  canti- 
dad de  caldo  que  se  crea  necesaria,  y  luego  que  esté  próxi- 
mo á  hervir,  se  echa'  el  pan,  dejándola  á  fuego  lento;  viér- 
tase en  la  sopera  con  un  batido  de  yemas  de  huevo,  cuan- 
do haya  de  servirse. 

28.  Sopa  flaca. — Córtense  seis  zanahorias  en  rebanadas 
pequeñas,  igual  número  de  nabos  y  cebollas  muy  menudas, 
una  col,  un  poco  de  apio.  Póngase  en  una  olla,  agregán- 
dole un  vaso  de  agua  común,  cuatro  onzas  de  mantequilla 
fresca,  un  manojo  de  perejil,  hágase  hervir  hasta  que  so 
evapore  el  agua,  agregándole  en  seguida  un  puño  de  chí- 
charos y  ejotes,  ó  bien  algunas  papas  ó  una  cucharada  de 
papas  desleídas  en  una  cantidad  de  agua  suficiente  para  que 
quede  con  un  caldo  regular.  Déjese  en  infusión  durante 
tres  horas  después  de  sazonado  convenientemente,  pasán- 
dolo por  tamiz. 

29.  Sopa  de  chichón». — Después  de  espumado  el  puche- 
ro, se  aparta  una  cantidad  de  caldo  y  en  ese  caldo  se  ponen 
á  cocer  los  chícharos  con  linas  cabezas  de  cebolla  partidas 
en  gajos,  procurando  que  los  chícharos  no  se  deshagan; 


90 

luego  te  toma  ana  menudencia  de  sal  y  se  despedaza  á  que 
quede  en  migajitas,  bien  deshecha,  se  le  revuelvo  un  hue- 
vo enieroain  batir,  un  poco  de  perejil  muy  picadito,  una 
raspadura  de  núes  moscada  y  media  cucharada  de  mante- 
quilla y  sal  al  gusto,  se  deja  como  un  cuarto  de  hora  repo- 
sando, luego  se  hacen  unas  al bondiguitas  que  se  van  echan- 
do al  caldo,  que  ha  de  estar  hirviendo,  y  una  poquita  ma* 
de  mantequilla,  la  sal  necesaria  y  se  deja  sazonar  un  rato. 
30.  Otra. — Se  ponen  á  cocer  los  chícharos  con  sal,  des- 
pués se  muelen  y  se  cuelan  por  una  piebancha,  se  fríe  este 
caldo  en  manteca  y  aceite,  y  un  poco  de  ajo,  se  sazona  con 
sal  y  un  poco  de  orégano,  y  se  deja  el  caldillo  muy  suelto. 
Se  fríen  luego  unos  trocitos  de  pan  en  manteca,  se  colocan 
en  .la  sopera  y  encima  se  les  echa  el  caldo  ya  dicho. 

81.  ¿topa  de  col. — Se  pica  la  col  menudita  y  se  pone  á  co- 
cer. Ya  que  está  medio  cocida  se  tira  esta  agua  y  se  le  echa 
caldo  del  puchero  y  tiras  de  jamón.  Después  se  pica  bastan- 
te ajo  menudito,  cebolla  también  muy  menuda  é  igualmen- 
te perejil  Se  fríen  e!  ajo  y  cebolla  con  una  poquita  de  pi- 
mienta. Ta  que  está  frito  se  le  echa  el  perejil  á  que  se  san- 
coche é  inmediatamente  se  le  echa  un  poco  de  caldo  en  que 
está  la  col,  que  también  ha  de  tener  zanahorias  en  rebana- 
das muy  menuditas.  Se  deja  que  dé  un  hervor  y  se  voltea 
allí  la  olla  con  todo,  se  le  echan  unas  pimientas  y  para  ser- 
virla se  pone  pan  frito  en  la  sopera  y  allí  se  echa  lo  anterior. 

82.  Sopa  de  frijoles. — Se  toma  pan  francés  frío,  se  rebana 
muy  delgado,  se  hace  refreír  en  oebolla,  jitomate  y  ajo,  agre- 
gándole algunas  especias,  mitad  manteca  y  mitad  aceite.  Se 
ponen  los  fríjoles  negros  á  cocer  ,y  ya  se  va  poniendo  el  pan 
en  la  tortera,  echándole  el  caldo  de  los  fríjoles  en  lugar  del 


91 

de  la  olla  en  intermedios,  dejando  un  poco  por  encima  don* 
de  fts  echarán  rebanadas  de  huevo  cocido  un  poco  embuti- 
das para  que  no  se  resequen.  Se  pone  la  tortera  en  fuego 
lento  y  otro  por  encima. 

*  33.  Sopa  de  lenteja*. — Se  cuece  la  lenteja  con  manteca, 
y  luego  se  machuca  por  una  coladera  para  que  salga  como  cal- 
do, al  que  se  le  agrega  el  caldo  del  puchero.  Se  pica  ace- 
dera y  se  echa  en  el  caldo  para  que  cueza  y  se  sirve  con  pan 
frito  en  trocitos. 

34.  Sopa  de  capirotada. — Se  toma  pan  francés  frío,  se  re- 
bana muy  delgado  y  se  va  poniendo  en  la  tortera  un  poco 
de  refrito  de  jitomate,  ajo  y  cebolla  con  sus  especias  finas 
que  se  tendrá  prevenido  en  cantidad  regular  para  ir  ponien- 
do encina  del  refrito  una  capa  de  pan,  y  sobre  esta  otra  de 
refrito,  un  polvo  de  queso  de  Flándes  rallado  y  un  poco  de 
Huevo  que  se  tendrá  listo  como  para  lamprear,  y  así  se  va 
cubriendo  la  tortera  hasta  concluir,  quedando  por  encima 
mi  poco  de  huevo.  I>as  rebanadas  de  pan  se  van  rom- 
piendo con  un  poco  de  caldo  del  cocido  para  que  no  queden 
secas  ni  tampoco  sueltas.  Se  pone  la  tortera  en  una  horni- 
lla con  poca  lumbre  y  encima  un  comal  con  poca  lumbre 
también. 

35.  Sopa  sencilla  con  huecos, — Se  hace  la  sopa  de  ajo  se- 
gún tenemos  dicho,  y  puestos  los  huevos  en  la  superficie  del 
pan,  se  moja  éste. 

3C.  Sopa  de  pan  con  pescado,  — Esta  sopa  se  hace  como  otra 
cualquiera,  solo  que  en  lugar  de  echar  caldo  del  cocido  se 
echa  de  pescado,  y  al  tiempo  de  servirla  se  guarnece  con 
algunos  trozos  del  mismo  pescado. 

37.   Sopa  de  papan.  — Mondadas  y  cocidas  hasta  que  se  des- 


22 

hagan,  se  pasan  por  el  cedazo,  se  rehogan  con  manteca,  cebo- 
lla picada  7  sal,  se  humedecen  con  la  misma  agua  en  que  co- 
cieron, y  esto  hará  un  caldo  sabroso,  con  el  que  se  remoja* 
rá  la  sopa  que  puede  ser  de  pan  y  de  arroz. 

38.  Oran  sopa  de  pan  aderezada.  — Se  cortan  sopas  de  buen 
pan  á  lo  largo,  y  delgadas,  y  se  tuestan  en  la  parrilla  de  red 
sin  que  se  quemen,  después  se  fríen  otros  pedacitos  de  pan 
delgados,  con  tocino  magro,  asadura  de  cabrito  ó  de  aves,  y 
cuando  está  hecha  la  fritura  se  echa  un  poco  de  perejil  y 
huevos  duros  bien  picado,  un  poco  de  queso  rallado,  clavo 
y  canela  en  corta  cantidad  y  retírese  del  fuego.  Pónganse 
en  la  cazuela  ó*  sopera  una  capa  del  pan  tostado  que  hemos 
dicho  primero,  y  otra  capa  del  picado  hecho  después,  y  así 
hasta  concluir:  en  seguida  se  hecha  caldo  del  cocido  6  sus- 
tancia de  carnes,  para  que  se  moje,  y  luego  se  pone  al  fue- 
ge,  añadiendo  un  poco  mas  de  caldo  para  que  de*  un  hervor, 
retirándolo  en  seguida,  y  si  se  quedase  muy  seca,  se  le  pue- 
de añadir  mas  caldo,  pero  en  corta  cantidad;  luego  que  esté* 
la  sopa  cocida,  se  hace  un  batido  de  huevo  y  se  echa  por 
encima,  cubriendo  la  sopera  ó  cazuela  con  una  tapadera,  y 
encima  algunas  ascuas  de  fuego  para  que  se  dore.  Si  se 
quiere  adornar,  se  pueden  poner  encima  cogollos  de  alcacho- 
fa, pájaros  fritos,  pechugas  de  ave,  rodajitas  de  huevo,  etc. 

39.  Sopa  de  carne. — Se  pone  á  cocer  un  pedazo  de  carne 
de  ternera  en  la  olla  y  luego  que  este*  medio  cocida  (mas  bien 
blanda  que  dura)  se  pica  en  pedacitos  pequeños;  se  parten 
pedazos  del  mismo  tamaño,  de  papas  crudas  en  igual  canti- 
dad que  la  carne,  se  pican  jitomates,  cebollas  y  ajos  como 
si  se  fuera  á  hacer  sopa  de  otra  clase.  Del  caldo  de  la  olla 
se  pone  la  cantidad  suficiente  en  una  cazuela  al  fuego  echan- 


23 

do  en  él  los  ajo»,  jitomates  y  cebollas  picadas,  una  cuchara- 
da regular  de  manteca,  la  carne  y  las  papas.  Se  pone  á  her- 
vir y  cuando  esto  bien  cocido  se  le  echa  pan  rallado  para 
espesarlo,  pero  no  en  cantidad  que  se  vuelva  atole.  Si  que- 
da algo  suelto  el  caldo  al  ponerlo  en  la  sopera  se  desmante- 
ca.   De  especias  solo  se  le  echa  pimienta  en  poca  cantidad. 

40.  Sopa  de  la  reino. — Se  matan  cuatro  gallinas  gordas  el 
día  anterior  al  en  que  van  á  usarse,  se  limpian  bien  y  se  cue- 
cen en  un/Tolla  limpia  con  lo  que  sigue: 

Doce  onzas  de  jamón  magro,  cortado  en  pedazos. 

Dos  nabos  en  pedazos. 

Tres  zanahorias. 

Una  cebolla. 

Una  docena  de  clavos  puestos  en  la  cebolla. 

Un  poco  de  perejil  y  tomillo. 

Dos  hojas  de  laurel. 

Un  poco  de  Apio  y  un  diente  de  ajo. 

Se  añade  á  esto  la  cantidad  de  agua  suficiente  y  se  pone 
al  fuego,  teniendo  mucho  cuidado  de  espumarlas,  pues  en 
esto  depende  considerablemente  el  buen  gusto  de  la  sopa. 
En  cuanto  comience  el  hervor,  se  dejan  en  un  fuego  suave, 
teniendo  cuidado  de  que  se  cuezan  sin  cesar  hasta  que  es- 
tén bien  cocidas.  Se  sacan  y  se  dejan  enfriar,  descansando 
sobre  la  quijada  inferior,  se  las  despoja  del  pellejo  y  se  mue- 
le la  carne  cu  un.  metate  hasta  que  se  haga  una  pasta  com- 
pacta, humedeciéndola  de  tiempo  en  tiempo  con  una  poca 
de  agua  de  la  misma  en  que  se  cocieron.  Se  pasa  por  tamiz 
y  se  toma  después  media  libra  de  arroz  muy  blanco,  se  lava 
y  medio  cuece,  se  tira  esta  agua  y  con  otra  nueva  se  vuelve 
Á  cocer  hasta  que  esté  tierno.    Se  muele  lo  mismo  que  las 


24 

gallinas,  se  pasa  por  el  tamiz  y  se  mezcla  todo,  se  le  añade 
el  agua  en  que  se  cocieron  las  gallinas,  se  calienta  bien  y 
se  sirve. 

Quedará  mejor  la  sopa  jai  se  añade  una  media  libra  de 
pierna  de  ternera,  pues  el  caldo  será  mas  fuerte.  Deberá  se- 
pararse uno  6  dos  pechos  de  gallina  para  hacer  croquetas  y 
ponerlas  en  la  sopa. 

41.  Sopa  de  tortuga. — Sacada  la  tortuga  de  la  conoha  se 
pone  á  cocer  y  luego  que  lo  está  se  pica,  dejándolo  todo  en 
el  caldo  en  que  se  ha  cocido,  se  pone  á  freir  recaudo,  oom- 
puesto  de  cebollinos,  perejil  y  un  poco  de  jitomate.  Cuando 
está  frito  se  echa  la  carne  picada  y  el  caldo,  y  todo  se  pone 
á  cocer  á  fuego  manso.  Se  muele  un  poco  de  canela,  clavo  y 
pimienta  y  se  echa  en  el  caldo.  Después  se  muelen  cuatro 
yemas  de  huevo,  se  hace  un  caldo  compuesto  de  agua  y  ha- 
rina, y  si  no  queda  espeso  se  freirá  mas  harina,  que  se  echa- 
rá en  el  caldo  con  media  botella  de  vino  de  Oporto,  de  Ma- 
dera ó  de  Jerez  y  media  de  vino  de  Burdeos.  Al  ponérsela 
sopa  en  la  mesa  se  la  adorna  con  unas  ruedas  de  huevo. 

42.  Sopa  imitación  de  la  de  tortuga. — Se  coge  una  cabeza 
de  ternera,  lavándose  muy  bien  áque  quede  blanca,  se  echa 
á  cocer  en  la  misma  olla  en  términos  que  no  sé  deshaga,  se 
saca  al  estar  ya  cocida  y.  se  pica  en  pedacitos  del  tamaño  de 
una  avellana.  Piqúese  cebolla  á  lo  largo,  del  tamaño  de  la 
carne  de  la  cabeza,  poniéndole  á  cocer  todo  junto  en  una 
olla  con  tapa,  agregando  un  manojito  amarrado  y  compues- 
to de  perejil,  tomillo,  laurel,  mejorana  y  una  rajlta  de  ca- 
nela, tres  dientes  de  ajo  machacados,  una  cebolla  entera 
claveteada  con  cinco  clavos  de  comer,  trece  6  nueve  pimien- 
tas de  Tabasoo  enteras,  pimienta  fina  molida,  unos  huevos 


25 

cocidos  y  rebanados  del  tamaño  de  la  carne,  y  media  nuez 
moscada.  Todo  esto  se  pone  á  cocer  largo  tiempo  hasta  la 
hora  de  servirse.  Se  le  echa  á  medio  hervor  media  botella 
de  vino  tinto  y  al  mandarse  á  la  mesa  otra  media.  Saldrá 
mejor  si  se  agregan  unos  pedazos  de  molleja  de  ternera  pi- 
cados cuando  está  en  la  lumbre. 

43.  Sopa  de  tortilla. — Se  pone  á  quemar  manteca  con  tres 
dientes  de  ajo  machacados  y  allí  se  fríe  la  tortilla  hasta  que 
quede  tiesa.  Luego  se  saca  la  tortilla,  se  fríe  jitomate  y  ce- 
bolla  picada,  se  vuelve  á  echar  allí  la  tortilla  con  caldo  su- 
ficiente, una  rama  de  epazote  y  unos  pedazos  de  chile  ancho 
por  encima. 

44.  Otra. — Se  coge  medio  de  tortillas  chiquitas  que  se  di- 
viden en  cuartos  y  se  fríen  en  manteca.  Se  pica  una  cebo- 
lla y  un  jitomate,  se  muele  cuartilla  de  acelgas  cocidas,  tres 
dientes  de  ajo  fritos  y  tres  pimientas  gordas.  Todo  se  fríe, 
se  cuece  chorizon,  lomo  de  puerco  y  jamón,  se  hace  trocitos 
y  se  fríe,  y  el  agua  en  que  se  coció  todo  esto  sirve  para  el 
caldillo.  Se  echa  en  el  el  recaudo  frito  con  una  cucharada 
de  aceite,  medio  de  vinagre,  un  puño  de  queso  rallado  y  sal 
al  gusto.  Se  echa  un  poco  de  caldo  en  la  cazuela,  una  capa 
de  tortillas,  una  de  queso  y  otra  de  chorizon,  jamón  y  lo- 
mo y  asi  sucesivamente  hasta  que  se  llena  la  cazuela  y  se 
pone  á  dos  fuegos. 

45.  Otra. — Se  corta  la  tortilla  en  cuadritos,  se  ponen  á 
cocer  unas  acelgas  y  se  pican,  luego  se  pica  cebolla  y  ajo 
menudo,  se  muele  una  corta  cantidad  de  las  acelgas,  se  fríen 
en  manteca  y  mantequilla  la  cebolla,  el  ajo  y  las  acelgas  mo- 
lidas y  esto  es  lo  que  compone  el  caldillo,  se  sazona  con  un 
poquito  de  aceite  y  vinagre,  luego  se  fríe  la  tortilla  en  man- 


36 

* 

tequüía  y  manteca,  se  unta  la  tortera  de  mantequilla  y  se  le 
va  poniendo  una  capa  de  tortilla,  otra  de  lomo  de  puerco, 
chorizon  en  rebanadas  y  las  acelgas  picadas  y  así  hasta 
llenar  la  tortera,  y  para  servirla  á  la  mesa  se  le  echa  el  cal- 
dillo hirviendo  y  se  adorna  con  queso  añejo  por  encima. 

46.  Sopa  de  calabaza  en  leche. — Se  toma  un  trozo  de  ca- 
labaza, y  quitándole  la  corteza  y  las  pepitas,  se  corta  en  pe- 
dacitos,  y  se  pone  al  fuego  en  una  cacerola  con  agua;  cuan- 
do esté  deshecha  como  mermelada  y  que  se  haya*  consumi- 
do el  agua,  se  echa  un  poco  de  manteca  y  sal,  dejándolo  co- 
cer un  poco.  Cuezase  leche  con  azúcar,  y  éohece  e*sta  sobre 
la  calabaza;  se  ponen  rebanadas  de  pan  en  un  platón,  mó- 
jese con  parte  de  la  calabaza,  y  cubriéndola,  póngase  á  fue- 
go lento  un  cuarto  de  hora,  cuidando  no  hierva,  y  al  tiem- 
po de  servirla  se  acaba  de  verter  el  resto  de  caldo  bien  ca- 
liente. 

47.  Sopa  de  sémola, — Se  cuece  el  caldo  del  puchero  ó  sus- 
tancias y  se  echa  la  sémola;  obsérvese  que  estando  mas  su- 
jeta esta  pasta  á  aglutinarse,  es  menester  menearla  mas  con- 
tinuamente que  las  demás  pastas:  media  hora  es  suficiente 
para  cocerse.  La  sémola  en  leche  se  hace  lo  mismo,  solo 
que  en  lugar  de  caldo  se  echa  leche. 

48.  Sopa  de  zanahoria*  nuevas. — Córtense  éstas  en  tiritas 
largas  y  delgadas,  escáldense,  pónganse  en  caldo,  cuando 
estén  cocidas  échense  en  la  sopera,  en  la  que  se  habrá  ya 
remojado  el  pan,  y  sírvase. 

49.  Sopa  de  albondiguillas. — En  una  tortera  se  ponen  cua- 
tro huevos,  la  cuarta  parte  de  un  cuartillo  de  leche,  dos  on- 
zas de  matequilla  fresca,  un  poquito  de  sal  y  pimienta;  bá- 
tase todo,  mezclándose  con  un  poco  de  harina,  hasta  que  st 


27 

haga  una  masa  consistente;  después  se  hacen  las  albondi- 
guillas del  tamaño  de  un  aceituna,  expolvoreándolas  con 
harina  y  se  fríen  en  manteca;  pónganse  en  la  sopera  y  se 
vierte  encima- el  caldo. 

60.  Sopa  de  albóndigas. — Se  pica  la  carne  y  se  le  echa  un 
poco  de  pan  remojado,  considerando  el  tanto  de  carne,  ce- 
bolla y  yerba  buena  molida  en  poca  cantidad  y  una  raspa- 
dura de  nuez  moscada  con  vinagre.  Se  hacen  bolitas  con 
esta  masa.  Se  echa  en  ej  caldo  un  poco  de  arroz,  y  cuando 
éste  esté  cocido  se  le  echan  las  bolitas  de  masa. 

51.  Sopa  de  pan  con  ostiones. — Se  hace  un  refrito  de  ce- 
bolla, jitomate  y  ajo,  echándole  un  chile  entero  con  espe- 
cias finas  de  clavo,  canela  y  pimienta  con  un  pedazo  de  chi- 
le ancho  para  que  tome  color.  Los  ostiones,  lavados  ya  con 
su  misma  agua,  se  echan  ón  el  refrito  en  seco,  porque  ellos 
mismos  despiden  mucha  agua  después  de  cocidos.  Luego  se 
ponen  las  rebanadas  de  pan  bien  delgadas  en  la  tortera,  en 
la  que  se  echa  una  capa  de  ostiones  y  otra  de  pan  hasta  con- 
cluir con  los  ostiones,  quedando  éstos  por  encima.  Ténga- 
se cuidado  de  echarles  perejil 

52.  Sopa  de  ostiones. — Se  pican  unos  dientes  de  ajo  su- 
mamente menudos  y  un  poco  de  perejil,  se  fríen  en  poca 
manteca,  y  ya  que  se  doré  se  le  echa  una  poca  de  harina 
y  se  menea  para  que  no  se  dore  mucho.  Se  saca  de  la  olla 
caldo  blanco  sin  azafrán  ni  chile  y  se  le  deja  que  dé  algu- 
nos hervores.  Se  baten  unas  yemas  de  huevo  y  se  vacian  en 
el  caldo  procurando  que  no  se  cuezan,  se  les  echa  un  bote 
de  ostiones  con  todo  el  caldo  que  tienen.  Se  parten  pedaci- 
tos  de  pan  francés  y  se  doran,  se  ponen  en  U  sopera  y  se 


28 

echa  en  ella  el  caldo  preparado,  al  cual  as  esprime  un  poco 
de  limón  al  gusto. 

*  53.  Oirá  sopa  de  ostiones. — Se  fríen  en  aceite  francés  y 
mantequilla  tres  cucharadas  de  harina,  y  ya  que  está  dora- 
da  se  fríe  un  poco  de  cebolla  muy  menuda,  y  se  le  echa  el 
caldo,  que  no  ha  de  tener  ni  chile  ni  col.  Una  Tez  que  la 
harina  está  bien  desbaratada  se  le  agrega  la  leche  y  los  os- 
tiones con  todo  y  su  caldo,  y  se  le  deja  que  dé  un  hervor. 
Antes  de  servirse  se  le  mezcla  un  poco  de  pimienta,  pereji 
y  dos  yemas  de  huevo  batidas  con  leche.  El  pan  se  tuesta 
en  rebanadas  ó  trocí  tos  cuadrados  fritos  en  manteca  6  man. 
toquilla. 

54.  Sopa  de  cebolla. — Tómese  una  cebolla,  que  se  pica 
muy  menuda,  friéndola  en  manteca  fresca  hasta  que  esté 
muy  dorada;  se  echa  un  poco  de  harina  y  se  deja  freír  has- 
ta que  se  ponga  casi  negra;  óchese  entonces  el  agua  suficien- 
te para  el  caldo,  sal  j  un  poco  de  pimienta  dejándola  her- 
vir seis  minutos;  se  cuela,  y  empápese  el  pan,  que  debe  ser 
corteza  tostada,  y  nada  de  miga. 

55.  Sopa  de  puerros. — Se  fríen  seis  ú  ocho  puerros  corta- 
dos en  trocitos  con  manteca,  se  echa  agua,  sal,  pimienta; 
déjese  cocer  todo,  y  se  cala  el  pan. 

56.  Sopa  de  ates  caseras. — Como  suelen  abundar  mucho 
las  aves  en  las  haciendas,  puede  hacerse  con  ellas  la  siguien- 
te sopa:  se  cuecen  los  despojos  después  de  hechos  pedazos 
en  una  olla,  y  cuando  estén  bien,  se  sacan  y  muelen  con  mi- 
ga de  pan,  que  se  deslíe  con  su  caldo;  después  se  pasa  todo 
por  un  colador.  Con  el  caldo  donde  se  cocieron  las  aves  se 
moja  la  sopa,  y  por  encima  se  le  echa  la  sustancia  que  he- 
mos dicho. 


29 

67.  Sopa  tostada.— Tómense  corteza»  de  pan  muy  cocido 
6  rebanadas  de  pan  tostado;  se  ponen  en  una  cazuela  con 
un  poco  de  caldo  á  fuego  muy  lento;  déjese  que  se  consuma 
el  caldo  y  que  se  peguen  un  poco  las  rebanadas;  y  después 
se  despegan,  echando  caldo  nuevo;  pásense  á  la  sopera  y  se 
sirven  caldosas. 

68.  Sopa  á  la  Monaco. — Se  cortan  rebanadas  iguales  de 
pan,  se  polvorean  con  un  poco  de  azúcar  blanca,  y  se  ponen 
cuidadosamente  en  una  parrilla  para  que  se  tuesten  á  fuego 
lento,  y  cuando  están  doradas  se  ponen  en  un  plato  6  sope- 
ra, echándoles  por  encima  leche  caliente  con  un  grano  de 
sal. 

69.  Sopa  de  almendra.  — Tómese  media  libra  de  almendras 
dulces,  que  se  dejan  en  agua  una  hora,  se  mondan  y  se  ma- 
chacan ea  el  metate  poco  á  poco  para  que  queden  bien  tri- 
turadas, se  deslíen  en  dos  cuartillos  de  agua  y  se  echa  el 
azúcar  suficiente,  que  es  media  libra  poco  mas,  y  disuelta 
bien  se  cuela  por  tamiz,  mojando  las  sopas  de  buen  pan  es- 
ponjado, qne  se  hacen  cocer  á  fuego  manso,  y  al  tiempo  de 
servirlas  se  expolvorean  con  un  poco  de  canela. 

60.  Sopa  d  la  habanera. — Para  esta  sopa  se  prepara  el  pan 
haciéndolo  primero  unas  tiras  largas  y  delgadas;  después  de 
haberlas  tostado  se  ponen  en  la  cazuela,  colocándolas  por 
capas,'  mezclando  entre  ellas  ajo  picado,  perejil  y  queso  ra- 
llado; después  se  machacan  unas  almendras  6  avellanas  que 
estén  tostadas,  y  se  echa  caldo  de  la  olla;  se  pone  á  her- 
vir, y  se  le  añaden  unos  clavillos,  ó  si  se  quiere,  canela,  y 
estando  ya  cocidas,  se  pone  la  mitad  en  la  sopa,  dejándola 
esta  hirviendo;  al  poco  tiempo  se  aparta  de  la  lumbre,  y 


90 

eiitonoea  se  le  echa  la  otra  mitad  de  la  salsa,  y  ae  pone  fue- 
go en  la  tapadera  para  que  ae  tueste  por  arriba. 

61.  fiopa  de  arroz  ajiaco  cubana. — Preparado  el  arroz 
muy  bien  lavado,  ae  pone  á  hervir  con  el  caldo  que  ae  crea 
necesario,  se  fríen  separadamente  en  aceite  unos  ajos  con 
un  poco  de  cebolla  y  un  jitomate,  y  echando  unas  gotas  de 
limón,  se  mezclan  al  separarlo  de  la  lumbre;  se  procura  me- 
nearlo muy  bien,  y  después  de  reposado  un  rato  se  puede 
comer. 

*  62.  Sopa  de  tallarín  en  estofado. — Se  corta  una  gallina 
en  pedazos.  Se  lava  y  se  echa  en  una  olla,  agregándole  es- 
pecias finas  molidas,  un  poco  de  manteca,  una  cabeza  de 
ajo,  machacados  los  dientes  con  todo  y  cascara,  un  poco  de 
cebolla  picada  y  bastante  vino  de  Málaga  con  la  sal  corres- 
pondiente. Se  pone  á  la  lumbre  tapando  bien  la  boca  de 
la  olla  con  un  papel  y  una  cazuelita  de  agua  encima.  Se 
agrega  á  la  gallina  un  poco  de  agua  para  que  ablande,  y 
un  poco  de  jamón  cortado  en  pedacitos.  Ta  que  se  acerca 
la  hora  de  comer,  se  hierven  los  tallarines  con  agua  y  un 
poco  de  sal.  Una  vez  cocidos  se  sacan  con  una  espumade- 
ra, ¿riéndose  en  una  sartén,  y  allí  mismo  se  echa  la  gallina 
que  está  hirviendo  en  la  olla,  cuyo  caldo  sirve  para  el  esto- 
fado, al  que  se  echa  antes  de  servirlo,  un  poco  de  vinagre. 

63.  Migas  (sopa  seca). — Pártase  pan  en  pedacitos,  y  des- 
pués se  le  rocía  con  un  poco  de  agua  para  que  se  humedez- 
ca. Póngase  en  una  sartén  ó  cacerola  manteca  ó  aceite,  se 
echa  un  ajo,  y  cuando  esté  dorado  se  añade  un  poco  de  pi- 
mienta y  sal,  y  en  seguida  se  echa  el  pan  que  antes  se  pre- 
paró, y  encima  algunas  cucharaditas  de  agua,  y  se  menea 
siempre  hasta  que  están  doradas,  sirviéndose  calientes. 


31 

También  se  echa,  en  vez  de  agua,  leche  tola  ó  azucarada, 
que  es  lo  que  llaman  migas  canas.  Se  hacen  también  las 
migas  sin  ajo,  echando,  en  vez  de  éste,  cebolla. 

64.  Gazpacho  (sopafiia). — Se  frota  con  ajo  crudo  una  so- 
pera, y  después  se  echa  aceite,  cominos,  pimienta  y  sal, 
y  se  bate  hasta  que  esté  bien  mezclado;  póngase  después 
pan  partido  en  pedacitos  redondos  ó  cuadrados,  y  después 
de  haberlo  revuelto  en  la  sopera,  se  echa  agua  fresca,  de- 
jándolo así  un  poco  hasta  que  el  pan  se  esponje,  y  en  el 
momento  de  servirlo  se*le  pone  vinagre  para  que.  el  pan  no 
se  agrie,  y  se  puedeu  añadir  algunas  rajas  de  pepino,  to- 
mate, pimienta  y  cebolla. 

65.  Caldo. — El  caldo,  base  de  todos  los  cocidos,  debe  ha- 
cerse siempre  con  carne  la  mas  fresca  y  sana.  Los  trozos  pre- 
feribles son:  el  cuarto  trasero,  las  costillas,  el  medio  de  las 
pierna  y  el  lomo.  Se  cuece  en  suficiente  cantidad  de  agua* 
un  trozo  de  vaca  y  los  despojos  de'  aves  y  caza;  se  sazona 
con  sal,  raíces,  ajo;  se  pone  á  un  fuego  lento,  y  así  se  deja 
hasta  que  esté  todo  bien  cocido;  siempre  que  se  necesite  el 
caldo,  se  cuela. 

66.  Caldo  de  sustancias. — Se  pone  media  mano  de  terne- 
ra, un  trozo  de  carne  de  vaca,  y  alguna  ave  á  cocer  con  cal- 
do de  puchero;  se  tiene  cuidado  de  menear  y  espumar,  aña- 
diéndole mas  caldo,  un  ajo  y  clavo  de  especia;  ha  de  cocer 
á  fuego  lento  cinco  horas,  y  después  se  pasa  por  tamiz. 

67.  Caldo  htcho  en  una  hora. — Córtese  en  pedacitos  una 
libra  de  carne  de  vaca  ó  ternera,  rehogúese  en  cazuela  con 
cebolla,  tocino  y  medio  vaso  de  agua,  hasta  que  principie  á 
pegarse,  en  cuyo  caso  se  añade  agua  hirviendo  y  se  sazona 


con  sel  Se  oueoe  tres  cuartos  de  hora  y  después  se  cuela 
por  tamiz. 

68.  Caldo  de  pollo  para  enfermo*. — Póngase  medio  pollo 
sin  gordura  á  hervir  en  un  cuartillo  de  agua  por  espacio  de 
una  hora,  y  se  le  añaden  unas  hojas  de  lechuga  y  perifollo, 
sazonándolo  con  sal  * 

69.  Caldo  de  ternera  para  enfermos, — Se  hace  del  mismo 
modo  que  el  anterior;  pero  el  tr\>zo  de  carne  debe  ser  de 
taba. 

70.  Caldo  de  gallina. — Cuezase  con  dos  cuartillos  y  me- 
dio de  agua  una  gallina,  después  de  haberla  limpiado  y  es- 
caldado las  patas.  Déjese  cocer  á  fuego  lento  hasta  que  se 
reduzca  á  dos  cuartillos. 

Este  caldo  no  se  sirve  generalmente  sino  á  los  enfermos. 

71.  Panatela  ó  sustancia  de  pan. — Se  cuece  á  fuego  lento 
y  por  bastante  tiempo  un  poco  de  pan  con  agua  común,  y 
luego  que  se  haya  empastado  se  añade  un  poco  de  manteca 
y  sal,  se  le  eoha  un  batido  de  yemas  y  se  sirve;  generalmen- 
te se  usa  para  el  alimento  de  ancianos  y  niños. 

72.  Jugo  de  aves  y  caza. — Tómense  despojos  de  caza  me- 
nor, como  perdices,  liebres,  aves  y  pies  de  ternera;  póngan- 
se en  una  cazuela,  con  media  botella  de  vino  blanco,  dos 
cebollas;  sazónese  todo,  se  cuece  hasta  que  se  Teduzca  á  ja- 
letina, humedeciéndolo  con  algunas  cucharadas  de  caldo 
del  puchero  para  que  no  se  pegue,  y  cuando  esto  todo  muy 
cocido,  se  cuela  y  clarifica  con  dos  claras  de  huevo. 

73.-  Jugo. — Pónganse  en  una  cazuela  unas  cebollas  y  za- 
nahorias medianas  hechas  ruedas,  y  encima  óchense  despo- 
jos de  carne  y  aves  con  medio  cuartillo  de  agua  ó  caldo;  de- 
be cocer  en  fuego  vivo,  y  cuando  tenga  el  color  dorado  se 


38 

echa  agua  hirviendo,  un  clavo  de  especia  y  tal,  que  cueza 
iodo  hora  y  media,  teniendo  cuidado  de  estrujar  bien  la* 
carnea  para  que  suelten  el  jugo;  pásese  éste  por  tamiz,  y 
después  se  echa  en  otra  vasija,  y  las  carnes  en  el  puchero, 
que  le  comunican  buen  sabor. 

74.  Extracto  de  buey  para  he  enfermo*. — Se  tritura  la 
carne  de  la  que  se  sacan  antes  cuidadosamente  el  pellejo  y 
la  grasa  muscular. 

Para  cada  libra  de  carne,  que  se  pica  como  para  hacer  mor* 
cillas,  se  emplean  dos  cuartillos  de  agua,  á  la  que  se  añade 
la  sal  correspondiente,  se  echa  la  carne  en  el  agua,  y  se  la 
pone  á  un  fuego  lento,  de  modo  que  se  mantenga  durante 
dos  horas  á  un  grado  de  calor  próximo  á  la  ebullición,  pero 
siu  que  hierva.  Al  cabo  de  dos  horas  se  quita  la  espuma  que 
haya  subido  á  la  superficie  del  líquido  que  en  ese  intervalo 
debe  menearse  de  cuando  en  cuando  sin  destaparlo.  Des- 
pués de  espumarlo  bien,  se  le  pone  de  nuevo  al  fuego,  que 
se  aviva  algo  mas  y  se  le  deja  hervir  como  un  cuarto  de  ho- 
ra. Hecho  esto  se  retira  la  olla  del  fuego  y  se  pasa  el  caldo 
por  un  tamiz  muy  fino.  Cuando  el  extracto  se  ha  enfriado 
bastante,  se  le  quita  toda  la  grasa  acumulada  á  la  superficie 
y  este  es  el  mejor  extracto  dé  carne  para  un  convalesciente. 
Si  se  quiere  usar  como  sopa  para  personas  en  buena  salud, 
después  de  espumarlo  se  le  agrega  una  cebolla  y  las  legum- 
bres necesarias  y  dá  un  excelente  caldo  para  el  puchero. 

76.  Consumado  d  la  Marta  Luisa. — Se  cuece  el  agua 
con  las  legumbres  necesarias  para  el  puchero  y  se  le  echa  la 
carne  desengrasada.  Se  hierve  una  gallina  hasta  que  la  car- 
ne adquiera  buen  color,  se  pone  en  la  olla  y  se  deja  con  la 
carne  durante  ocho  horas.  Ha  de  hervir  sin  parar,  pero  len- 

LA  COCINERA  POBLANA. — TOM.L — &, 


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tomento.  Debe  reducirte  el  agua  á  la  mitad  y  podemos 
gurar  que  este  consumado  es  mejor  y  mas  sano  que  el  que 
se  compra  con  grandes  gastos. 

76.  Caldo. — A  una  libra  de  harina  se  incorpora  medio  de 
tuétanos  de  Taca,  se  le  mezclan  después  cuatro  hueros, 
un  poco  de  sal  y  pimiento,  y-  batido  todo  se  pondrá  en  el 
caldo  de  la  olla  y  se  conocerá  que  está  cocido  cuando  metien- 
do un  tenedor  salga  limpio. 

77.  Caldillo. — Se  cuecen  unos  huesos  de  cadera,  de  pe- 
cho,  uno  de  tuétano,  dos  cebollas  enteras  y  una  cabeza  de 
ajos,  jitomates  molidos,  dos  claros,  dos  pimientos  y  dos  ra- 
jas de  canela,  todo;  molido  y  sé  agrega  al  caldillo  jamón  pi- 
cado, yerbas,  tomillo  y  orégano,  zanahorias  y  nabo.  Des- 
pués se  pone  la  olla  á  fuego  manso,  se  le  echa  riño  Jeras 
ó  Malaga  y  un  poco  de  vinagre,  ya  que  está  sazonado  se  va- 
cía en  una  cacerola  poniéndose  en  rescoldo  á  que  dé  un  her- 
yor  con  la  sopa,  y  si  le  falto  vino  se  le  echa  para  servir 
la  sopa. 

78.  Caldo  dé  habas. — Se  remojan  las  habas  de  un  din  pa- 
ra otro,  se  machacan  en  un  metate  para  que  con  mas  faci- 
lidad suelten  las  cascaras,  se  lavan  muy  bien,  luego  se  po- 
nen en  una  olla  con  agua  fria  y  se  ponen  á  hervir;  ya  que 
comienzan  á  desbaratarse  se  les  añade  ajo,  yerbabuena, 
cebolla,  col  y  manteca,  su  sal  correspondiente  y  se  dejan 
cocer  hasta  que  quede  espeso. 

79.  Otro. — Se  pelan  las  habas  en  crudo,  ae  lavan,  se 
echan  en  una  olla  con  agua  suficiente,  para  no  tener  necesi- 
dad de  echarles  más,  porque  esto  las  descompondría,  se  les 
echa  al  mismo  tiempo  garbanzos,  manteca  y  sal,  y  se  dejan 
hervir,  ya  que  están  á  medio  cocer  se  les  añade  ajo,  cebolla, 


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yerbabuenay  un  ohilpotle  crudo,  ó  bien  se  fríe  éste  en 
manteca,  se  baoe  pedaoitos  para  que  se  sirva  cada  ano  á  tu 
tgusto,  añadiéndole  nn  poco  de  aceite  de  comer. 


PURÉS. 


Ké  ana  topa  preparada  con  él  sumo  dé  algunas  legumbres 
meselado  con  grasas  y  especias,  es  de  buena  digestión  y  sa- 
broso, y  se  hace  también  dé  pan,  pastas  y  fócalas.  Hay 
prensas  manuables,  qué  sacan  perfectamente  la  parte  fari- 
nácea de  las  lentejas,  fríjoles,  arroz,  etc.,  y  cuestan  poco  en 
los  almacenes  de  efectos  de  cocina, 

80.  Puré  de  chícharos,  lentejas,  frijol  Moneo,  habas,  etc. — Se 
cuece  cualquiera  de  estas  legumbres  verdes  en  caldo,  aña- 
diendo ruedecitas  de  zanahorias  y  cebollas  con  un  poco  de 
manteca;  después  de  cocidas  se  muelen  en  el  metate,  y  el 
sumo  se  pasa  por  tamiz,  añadiéndole  mas  caldo  si  estuviese 
muy  espeso;  después  se  echa  este  sumo  sobre  algunos  pocos 
y  pequeños  pedaoitos  de  pan  frito,  y  Cuando  estén  bien  ca- 
lados se  sirve.  Si  se  quiere  que  conserve  el  puré  el  color 
verde  de  la  legumore,  puede  echarse  el  jugo  de  unas  espi- 
nacas machacadas. 

En  dia  de  vigilia,  se  pone  caldo  de  pescado  y  aceite  en 

V  ^#^w  ^Sj^b*   asjSj^p^SjS»  v^^r^^swe 

De  las  legumbres  secas  se  hacen  también  purés, '  siguien- 
do el  mismo  método,  así  como  de  papas,  olederos,  apio  y 

otras  hortalizas. 

8L    Puré  de  chícharo*  vento.  —Dos  libras  de  chícharos 


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verdes  se  onecen  en  agua  hirviendo  oon  sal,  á  fuego  fuerte 
pera  que  no  pierdan  el  oolor;  después  de  cocidas»  ae  aaoan 
loa  ohíoharoa  y  ae  lea  pone  en  agua  fría  pasándolos  por  el 
eedaao  ó  tamiz.  Póngante  deapuea  en  una  cacerola  limpia 
oon  un  poco  de  azúcar,  ae  aumenta  el  caldo  suficiente,  para 
que  no  quede  ni  muy  claro  ni  muy  espeso,  y  ae  sirve  muy 
caliente  con  algunos  pedacitos  de  pan  fritos. 

82.  Puré  de  chichón*  tecos. — Se  rehogan  en  una  cazue- 
la oon  manteca  ó  mantequilla,  cebollas  y  zanahorias  cor- 
tadas, en  oantidad  proporcionada,  y  cuando  estén  *  un  poco 
de  tiempo  ae  echa  caldo,  poniendo  un  manojito  de  yerbea 
finas,  dejándolo  unjpar  de  horas  á  un  fuego  muy  lento;  des- 
pués ae  pasa  por  tamiz,  se  sazona,  y  caliente  se  sirve. 

83. '  Puré  de  raice*. — Se  mondan,  lavan  y  cortan  dos  ce- 
bollas, ocho  zanahorias  y  dos  nabos;  se  ponen  en  agua  hir- 
viendo por  un  cuarto  de  hora  á  fuego  lento,  después  se  re- 
frescan y  enjugan.  Se  rehogan  con  manteca  ó  mantequi- 
lla, revolviéndolas  de  cuando  en  cuando  para  que  no  se 
peguen  al  fondo  de  la  cacerola,  y  cuando  están  blandas  se 
mojan  con  caldo,  haciéndolas  hervir  despacio  al  ángulo  do 
la  hornilla,  y  deapuea  de  cocidas,  se  pasan  por  tamiz,  se  ca- 
lientan y  sirven. 

84.  Puré  de  mnakoriae. — Pónganse  en  una  cacerola,  con 
suficiente  oantidad  de  manteca,  diez  ó  quince  zanahorias  cor- 
tadas en  rodajas,  mójense  con  buen  caldo  cuando  estén  bien 
rehogadas,  y  háganse  cocer.  Hecho  ésto  cuélense,  redúz- 
case el  puré,  vuélvase  á  cocer  éste  por  espacio  de  cuatro  ho- 
ras, y  póngase  eobre  toda  especie  de  sopas, 

86.  Puré  d  lo  conde  — Se  limpian  y  lavan  doa  librea  de  frí- 
jol blanco,  ó. habichuelas,  poniéndolas  á  cocer  oon  agua  fría, 


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añadiendo  unos  pedacitos  de  tocino,  ana  cebolla,  zanahoria, 
laurel,  tomillo,  perejil  y  dos  clavo»  de  especia;  cuando  están 
cocidas  se  quita  el  tocino,  las  legumbres  y  el  agua,  y  so  pa- 
san por  el  tamiz  6  cedazo  con  caldo,  después  se  sazona,  se 
vuelve  á  calentar  y  so  sirve  con  pedacitos  de  pan  fritos. 

86.  Puré  de  lentejas, — Cuezase  una  libra  de  lentejas  en  cal- 
do del  puchero,  un  poco  de  tocino,  dos  zanahorias,  dos  cebo- 
llas adelgazadas  y  rehogadas  en  manteca  y  dos  claros.  Guan- 
do esté  todo  cocido,  se  pasa  por  una  coladera,  se  adelgaza 
el  puré  con  caldo,  se  cuece  en  una  cacerola  para  espumarlo, 
y  se  echa  sobre  cortezas  de  pan  fritas. 

Se  puedo  hacer  esto  puré*  para  vigilia,  sustituyendo  el 
aceite  al  tocino. 

87.  Puré  de  garbanzas. — Se  cuecen  con  caldo  de  carne  dos 
libras  do  garbanzos  ("que  se  habrán  puesto  á  remojar  la  vis- 
pera  con  un  poco  de  sal)  y  se  añade  una  cebolla,  tocino,  za- 
nahoria y  un  manojito  de  yerbas;  se  procurará  que  su  her- 
vor sea  poco  á  poco,  y  cuando  estén  cocidos  se  les  quita  la 
cebolla,  zanahoria  y  tocino,  se  pasa  todo  por  el  tamiz  6  ce- 
dazo, estrujándolo  bien,  y  desengrasado  y  sazonado,  se  ca- 
lienta y  so  sirve  el  puré*. 

88.  Puré  de  papas.  — Se  cuecen  con  agua  y  sal  cuatro  li- 
bras de  papas  blancas,  mondadas  y  cortadas  en  cuatro  par- 
tes cada  una.  Antes  de  su  total  cocimiento  se  les  quita 
bien  toda  el  agua,  y  en  la  misma  cacerola  tapada  se  pondrán 
bajo  la  hornilla- para  que  acaben  de  cocer  y  se  pongan  ha- 
rinosas. Entonces  se  revolverán  con  una  cuchara,  ponien- 
do un  poco  de  mantequilla  y  pasadas  al  cedazo,  te  desharán 
con  caldo  de  aves  y  pasarán  por  el  tamiz. 

89.  Otro. — Se  ponen  á  cocer  las  papas  ya  peladas  en  un 


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poco  de  agua,  topad*  la  olla  con  un  plato  que  tonga  también 
agua  para  que  el  vapor  del  agua  las  acabe  de  cocer.  Se  ba- 
ten luego  como  para  las  frituras  hasta  que  hagan  ojos.  Lue- 
go se  les  bate  una  nato  de  leche,  un  pedazo  de  mantequilla 
y  se  le  ya  echando  leche  poco  á  poco  hasta  que  esté*  del  es- 
peso  que  se  quiera.  Después  de  esto  ya  no  se  vuelven  á 
poner  en  la  lumbre. 

90.  Otro. — Pónganse  en  una  escuela  seis  cebollas  y  otras 
tantas  zanahorias  medianas  hechas  ruedas,  y  encima  se 
echan  los  despojos  de  carne  y  aves  con  un  vaso  de  agua  6 
caldo,  y  póngase  á  un  fuego  vivo.  Cuando  ha  tomado  todo 
un  bello  color,  se  humedece  con  agua  hirviendo,  añadiendo 
un  manojito  guarnecido  con  clavos  de  especia  y  un  poco  de 
sal :  entonces  se  deja  cocer  por  espacio  de  hora  y  media  á 
un  fuego  moderado,  estrujando  y  comprimiendo  las  carnes 
durante  la  cocción  para  que  suelten  el  jugo.  Pásese  éste 
por  tamiz  y  después  de  frío  se  vierte  muy  despacio  en  la 
cazuela  6  sopera.  Las  carnes  se  echan  en  el  puchero  y  le 
comunican  un  buen  sabor. 

91.  Otro. — Se  unta  con  manteca  el  fondo  de  una  cazuela 
y  se  echa  una  libra  de  despojos  de  carne  magra  de  ternera, 
juntamente  oon  una  cebolla  grande  claveteada,  con  on  cla- 
vó de  especia  y  un»  zanahoria  por  cada  trozo  de  carne.  Se 
pone  la  cazuela  cubierta  con  un  comal  sobre  fuego  manso 
para  que  suelte  la  humedad  y  adquiera  buena  consistencia- 
y  color.  Entonces  se  afiade  una  6  dos  cucharadas  de  hari- 
na, humedeciéndola  oon  caldo,  de  manera  que  no  esté  clara 
ni  espesa.  Échese  un  manojito  de  laurel,  perejil  y  apio,  y 
sé  deja  cocer  cuatro  horas  sobre  el  borde  del  hornillo.  Se 
quito  la  grasa  de  espuma  pasándola  después  por  un  colador 


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muy  fino  y  «e  guarda  para  cuando  se  necesite.  Si  á  la  ter- 
nera se  afiaden  algunas  tajadas  delgaditas  da  jamón  aera 
mucho  mejor,  pero  en  este  caso  se  debe  de  echar  menos  sal 

COCIDO  O  PUCHERO  COMÚN. 

En  una  olla  proporcionada  á  las  viandas  que  se  han  de 
cocer,  se  pone  agua,  y  luego  que  esté  caliente,  se  echan  los 
garbanzos  y  carne  bien  lavada  y  despellejada;  por  cada  li- 
bra de  vaca  ó*  carnero  debe  echarse  media  de  garbansos; 
cuando  principie  á  Hervir  se  espumará,  cuidando  no  exce- 
derse, á  fin  de  no  privar  al  cocido  de  la  sustancia;  dos  ho- 
ras después  puede  añadirse  un  poco  de  jamón,  tocino  y  una 
cebolla  pequeña;  se  deja  hervir  todo  A  fuego  lento,  sazo- 
nándolo con  sal,  y  añadiéndole  de  cuando  en  cuando  agua 
templada;  si  á  este  conjunto  se  añade  media  gallina,  etcéte- 
ra, se  logrará  con  método  tan  sencillo  y  fácil  lo  mejor  que 
hay  en  cocido  ordinario;  el  caldo  sirve  para  remojar  todos 
los  guisados  en  que  se  necesita  emplear  una  sustancia  líqui- 
da sin  recurrir  al  agua.  La  verdura  se  cuece  aparte  con  to- 
cino añejo,  chorizo  6  morcilla. 

92.  Puchero  español — Se  echan  á  una  6  dos  libras  de 
carne  de  ternera  ó*  de  carnero  una  6  dos  libras  de  garban- 
zos, en  proporción  y  remojados  desde  la  noche  anterior. 
Se  le  agrega  una  buena  tajada  de  jamón  magro  crudo,  y 
menudos  de  ave.  Cuando  hierve  se  espuma  y  se  le  echa 
la  sal  Después  de  un  hervor  de  media  hora,  se  quita  el 
caldo  necesario  para  la  salsa  que  se  quiera  preparar.  Se 
añaden  al  puchero  las  legumbres,  que  se  harán  hervir  por 


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separado.  Antea  de  que  todo  esté*  bien  cocido  se  le  agrega 
un  chorizo.  Guando  ae  sirve,  ae  ponen  las  carnes  en  una 
cazuela,  y  las  legumbres  en  otra  con  sota  de  jitomate  óeaha 
de  perejil  Para  hacer  la  primera,  se  parten  tres  jitomates 
y  se  pasan  por  tamiz,  hecho  lo  cual  se  ponen  en  una  cazue- 
la con  el  caldo'  que  se  separó,  agregándole  comino,  sal  y  vi- 
nagre. Se  deja  hervir  todo  un  momento  y  se  echa  en  la 
salsera.  Para  hacer  Ja.  segunda  se  muele  perejil  muy  verde 
liado  con  miga  de  pan,  y  ambas  cosas  se  ponen  en  una  ca- 
zuela con  caldo,  sal  y  vinagre  dejándolo  hervir  un  buen  ra- 
to y  meneándolo  con  una  cuchara  de  palo  para  que  se  des- 
lía y  se  sirve. 

93.  Otta  podrida.  — Puestos  los  garbanzos  y  la  carne  co- 
mo se  ha  dicho,  se  espuma,  y  después  se  añade  una  gallina,, 
tocino,  jamón,  pies  y  oreja  de  cerdo,  rellenos  y  despojos 
de  aves. 

94.  Cocido  de  verdura. — Este  cocido  solo  se  diferencia  de 
los  demás  en  que  la  verdura  se  cuece  con  la  carne,  tocino, 
etc. ;  debe  cuidarse  de  echarla  después  de  que  haya  cocido 
bien  la  carne;  se  sazona  con  algunas  especias;  así  se  acos- 
tumbra en  Andalucía. 

95.  Cocido  ó  puchero  de  enfermo. — Se  hace  por  lo  regular, 
con  gallina  6  carnero,  añadiendo,  si  ha  de  ser  sustancioso, 
algunos  garbanzos  y  jamón;  debe  cocerse  el  caldo  antes  de 
servirse;  si  se  quiere  que  tenga  mayor  sustancia,  se  muele 
la  gallina  en  el  metate  con  miga  de  pan  y  se-  deslíe  en  cal- 
do, después  se  cuela,  y  «asonada  se  pone  al  fuego,  pero  sin 
que  cueza. 

96.  Cocido  restaurante. — Añádase  al  puchero  común  una 
gallina  vieja,  un  trozo  de  vaca  magra  y  otro  de  ternera,  dos 


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zanahorias,  cebollas,  puerros,  un  remito  de  yerbee  olorosas, 
claro  de  especia,  y  se  cuece  hasta  que  se  reduzca  á  una  ter- 
cera parte;  y  entonces  se  le  quita  la  grasa. 

97.  Cocido  á  la  francesa. — Se  cuece  una  libra  de  carne  en 
tres  cuartillos  de  agua,  con  sal,  dejándola  cocer  poco  á  poco 
y  espumándola  bien;  después  se  agrega  alguna  zanahoria, 
nabo,  perejil,  clavo  de  especia,  ajo  y  una  cebolla  tostada,  6 
bien  un  poco  de  azúcar  quemada  para  dar  color  al  caldo; 
debe  cocer  cinco  horas  á  fuego  lento,  y  con  el  caldo,  des- 
pués de  colado,  se  hace  la  sopa.  Suele  echarse,  también  al- 
gún despojo  de  are. 

98.  Olla  cubana. — Se  prepara  una  casuola  mediana  con 
agua  hasta  la  mitad;  se  le  echa  un  poco  de  sal,  dos  libras 
de  carne  de  ternera  de  las  riñonadas,  un  pedazo  de  jamón, 
un  puñado  de  garbanzos  remojados  ya  de  la  noche  anterior, 
y  una  libra  de  puerco  fresco;  se  le  añade  un  ouarto  de  ga- 
llina y  se  pone  á  cocer,  teniendo  cuidado  de  quitarle  la  es- 
puma. Después  que  ha  hervido  como  una  hora  se  le  ponen, 
bien  pelados  y  limpios,  un  plátano  con  su  cascara,  un  cho- 
rizo, un  puñado  de  ejotes,  media  col,  un  pedazo  de  cala- 
baza, una  berengena,  un  poco  de  malanga,  un  pedazo  de 
calabaza  de  Castilla,  dos  nabos,  dos  camotes,  cuatro  jito- 
mates, dos  chayóte»,  una  cebolla  y  un  pedazo  de  calabaza; 
se  deja  que  hierra  todo  como  otra  hora,  y  se  tiene  cuidado 
de  quitar  la  espuma  que  vuelva  á  arrojar,  y  para  darle  la 
sazón  se  muele  un  poco  de  sal,  dos  6  tres  ajos,  unos  granos 
de  cominos  y  tie  culantro  con  dos  de  pimienta,  y  hecho  .to- 
do una  pasta,  se  deslíe  con  caldo  de  la  olla,  y  se  echan  en 
la  misma,  con  dos  hebras  de  azafrán  desmenuzado;  se  deja 
hervir  un  rato,  y  se  sirve. 


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99.  OUa  podrida  mexicana. — Ya  que  está  hirviendo  el 
agua  se  eoha  ternera,  carnero,  pies  de  puerco,  gallina,  car- 
ne de  Toluca,  jamón,  chorno*,  morcilla  y  garbanzos.  Es- 
tando espumada  la  olla  se  le  añade  espinazo  6  carne  de  puer- 
co, cabezas  de  ajo  según  el  tamaño  de  la  olla,  cebollas  en- 
teras, yerba  buena,  un  ohile  ancho  molido  con  cominos,  es- 
pecias, culantro,  arroz,  y  se  tapa  la  olla  lo  mejor  posible  á 
que  hierva  y  le  quede  poco  caldo.  Se  amarra  una  col  con 
un  hilo  y  se  echa  á  cocer  y  unos  nabos  mondados  y  al  ci- 
tar la  col  cocida  se  pica  cebolla  y  ajo,  se  fríen,  y  en  esto  se 
echa  la  col  agregándole  chícharos,  ejotes,  habas  verdes  y 
toda  clase  de  verdura.  También  se  le  echa  á  la  olla  podri- 
da calabaza  de  Castilla,  camote,  peras,  plátano,  etc.  A  las 
verduras  cuando  se  están  friendo  se  les  echa  caldo  de  la 
olla,  y  un  poco  de  polvo  de  pimienta. 

100.  Olla  ó  cocido  veracrwano. — Se  toma  una  olla  que 
contenga  como  dos  jarros  de  agua  fría;  échense  en  ella  dos 
libras  de  ternera,  dos  de  vaca  y  un  trozo  de  tocineta  de  Ve- 
racruz;  póngase  á  poco  fuego,  se  le  echan  dos  jarros  más  de 
agua  cuando  hayan  perdido  los  primeros  la  frialdad;  se  avi- 
va el  fuego  para  que  produzca  espuma;  se  quita  ésta  confor- 
me se  vaya  levantando,  hasta  que  se  vea  no  queda  ya;  des- 
pués de  hervir  como  unas  ocho  horas  á  fuego  igual;  y  cuan- 
do lleve  cuatro  de  cocción,  sé  le  añaden  media  col,  una  le- 
chuga, dos  6  tres  nabos,  igual  cantidad  de  zanahorias,  un 
puñado  de  garbanzos  remojados,  despojos  de  un  pavo,  me- 
día  gallina  y  unos  huesos  de  cordero  asado,  un  poco  de  pe- 
rejil, tres  clavos' y  una  cebolla  asada,  y  se  le  añade  agua  ca- 
liente si  la  necesita,  hasta  las  ocho  horas  expresadas. 


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POTAJES. 

El  potaje  español  es  un-  conjunto  de  legumbres  y  horta- 
lizas reunidas,  compuestas  con  aceite  frito,  espesado  con 
harina  y  huevo,  y  servido  en  los  dias  de  viernes.  En  el  po- 
taje de  garbanzos  se  tendrá  presente  que  es  necesario  que 
están  algunas  horas  en  agua  de  sal  6  de  pescado,  sin  cuyo 
requisito  saldrían  ásperos,  por  la  falta  de  la  carna 

101.  Potaje  de  garbanzo*. — Después  de  bien  cocidos  con 
cebolla,  se  guisan  con  aceite,  en  el  cual  se  habrán  frito  ajos 
y  pimiento;  se  echap  huevos  batidos,  6  pan  mojado  y  di- 
suelto en  sgua,  y  un  poco  de  clavo  y  pimienta. 

102.  Potaje  de  garbanzo*  con  arroz. — Lo  mismo  que  el  an- 
terior, sin  mas  que  hacer  cocer  una  sexta  parte  de  arroz  en 
proporción  á  los  garbanzos,  después  del  guiso,  pero  antes 
de  espesarlos. 

103.  Potaje  de  garbanzo*  con  «jptnaau.— Solo  se  diferen- 
cia de  los  anteriores  en  que  antes  de  echar  el  aceite  se  po- 
nen en  los  garbanzos  ya  cocidos,  espinacas  también  cocidas 
aparte. 

104.  Potaje  defirijoU*  blanco*. — Se  ponen  á  cocer,  y  des- 
pués del  primer  hervor  se  les  cambia  el  agua,  y  cuando  es- 
tán bien  cocidos  se  componen  con  cebolla  frita,  ajos  macha- 
cados, azafrán  y  una  hoja  de  yerbabuens;  si  se  quiere  espe- 
sar, se  hace  esto  con  un  poco  de  pan  rallado,  queso  6  arroz. 
También  se  componen  los  frijoles  oon  aceite  crudo,  pimien- 
ta, perejil  y  yerbabuena,  rehogándolos  á  fuego  manso.  Otros 
los  comen  con  solo  aceite  y  vinagre. 

106.  Potaje  de  chícharo*. — Se  echan  en  la  olla  cuando  es- 


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tá  hirviendo  con  unos  cogollos  de  lechuga  y  acederas,  po- 
niéndoles el  guiso  que  á  los  demás  potajes;  y  si  fuesen  se- 
cos los  chícharos,  se  guisan  lo  mismo  que  los  garbanzos. 

106.  Potaje  de  lentejas. — Se  cuecen  con  sal,  poniéndolas 
en  una  cacerola  con  aceite  6  manteca  y  perejil  picado,  se 
rehogan  un  poco,  y  después  se  añade  agua,  sirviéndolo  con 
unas  cortezas  fritas  ó  sin  ellas. 

107.  Potaje  de  coles. — Después  de  bien  lavadas,  se  cuecen 
con  sal;  después  se  enfrian  y  escurren,  cortándolas  en  pe- 
dazos gruesos;  se  rehogan  con  aceite  6  manteca,  sal,  pimien- 
ta y  nuez  moscada  en  polvo.  Después  se  echa  nata  de  le- 
che, y  se  cuece  á  fuego  lento  hasta  que  la  sal  se  reduzca  y 
quede  la  col  bien  ligada. 

108.  Potaje  de  nabo*  — Se  mondan  y  cortan  en  la  forma 
que  parezca  mejor,  y  se  cuecen  con  sal,  manteca  6  aceite, 
sirviéndolos  con  una  salsa  blanca. 

109.  Potaje  de  espinaca*. — Cortadas,  mondadas  y  lavadas, 
se  rehogan  con  manteca  6  aceite,  sal  y  pimienta;  después  se 
añade  para  la  salsa  aceite  6  manteca,  y  se  sirven  con  corte- 
zas de  pan  fritas. 

110.  Potaje  de  castañas — Se  lavan  las  castañas  pilongas, 
y  se  cu  wen  con  un  poco  de  anis;  después  se  rehogan  con 
aceite  6  manteca;  y  se  forma  una  salvilla  como  para  los  de- 
más potajes  comunes. 

SALSAS. 

111.  Salsa  d  la  provenzaL — A  dos  yemas  de  huevo  se 
echará  una  cucharada  de  zumo  de  limón,  pimienta  en  pol- 
vo y  ajo  majado.    Se  sazona  y  pone  al  (fuego  muy  lento, 


46 

meneándolo  continuamente,  y  añadiendo  adema*  un  poco 
de  aceite. 

112.  Salsa  suprema. — Esta  salta,  calificada  así  en  la  coci- 
na francesa,  sin  dada  por  su  excelencia  ó  supereminencia, 
se  prepara  simplemente  reduciendo  la  cantidad  de  caldo  del 
puchero  6  de  otras  sustancias  á  la  mitad  por  medio  del  her- 
vor. Luego  se  añade  un  poco  de  mantequilla  oocieudo  siem- 
pre á  fuego  fuerte,  y  cuando  haya  tomado  cuerpo  sin  estar 
demasiado  espesa,  se  retira,  y  se  añade  un  poco  de  zumo  de 
limón  6  agraz. 

113.  Salta  de  manteca  negra. — En  una  sartén  ó  cacerola 
se  fríe  mantequilla  hasta  que  se  ponga  casi  negra;  entóneos 
se  fríen  también  en  ella  un  poco  de  perejil,  después  de  fri- 
to, Tinagre,  sal,  y  se  deja  cocer  cerca  del  fuego  un  instante. 

114.  Otra  salea  de  manteca  negra. — Póngase  en  una  sar- 
tén mantequilla,  la  que  se  dejará  hasta  que  también  se  que- 
me, sin  estar  negra;  se  pone  un  poco  de  perejil  para  que  so 
fría,  vinagre,  Bal,  pimienta,  laurel,  se  deja  que  cueza  un 
poco  y  se  quita  el  perejil  y  el  laurel  con  una  espumadera. 

115.  Salsa  holandesa. — Se  mezcla  un  trozo  de  mantequi- 
lla con  un  poco  de  harina  y  unas  gotas  de  vinagre,  medio 
vaso  de  agua,  sal  y  nuez  moscada  raspada,  con  un  batido 
do  yemas  de  huevo;  se  pone  al  fuego,  meneándolo  continua- 
mente y  cuidando  de  que  no  hiorva,  porque  se  cuajaría. 

116.  Salsa  general. — En  un  cuartillo  de  caldo  común  se 
mezcla  medio  de  vino  blanco,  sazonándolo  con  sal,  pimien- 
ta, corteza  de  limón,  dos  hojas  de  laurel  y  un  poco  de  vina- 
gre; se  deja  en  infusión  á  un  fuego  lento  continuo  por  espa- 
cio de  diez  6  doce  horas,  pasándolo  por  tamiz  para  que  sir- 
va á  toda  especie  de  aves,  legumbres  y  peces,  y  tiene  la  ven* 


46 

Uja  ó>  poder  ooiiservaiae  ein  alteraron  alguna  después  de 
muchos  diae. 

117.  Salsa  coa***. —En  un plato tapona untrosode man* 
teca,  perejil  muy  bien  picado,  aal  7  pimienta;  aa  mésela  f 
revuelve  todo  bien,  y  después  aa  añade  un  poco  da  vinagra. 

118.  Otra, — Se  pone  en  una.  oaoerola  vinagra,  tomillo, 
laurel,  perejil,  oebolla  y  polvo  de  pimienta;  aa  haca  freír  un 
poco  de  pan,  que  aa  deslíe  en  caldo,  echando  despuea  la  aal; 
deba  hacérsela  hervir  un  cuarto  de  hora,  pasándola  después 
por  el  tamiz. 

110.  Otra.  -Se  hace  con  caldo  6  grasa,  aa  pona  una  cu- 
charada de  vinagre,  sal,  pimienta  y  perejil;  se  deja  hervir, 
y  después  sirve  para  recalentar  el  aaado  6  cocido  que  quedó 
del  dia  anterior. 

120.  Salsa  picante,  — Se  cortan  .muy  finos  dos  ó  tres  puer- 
ros 6  ajos  silvestres,  los  que  se  pondrán  á  freir  con  un  poco 
de  manteca;  se  echará  la  cuarta  parte  de  un  vaso  de  vina- 
gre, el  que  se  dejará  reducir,  aumentando  luego  un  cucha- 
ron dejsalsa  española,  dejándolo  todo  así  oocer  á  fuego  len- 
to por  un  cuarto  de  hora  al  ángulo  de  la  hornilla;  se  desen- 
grasa, y  al  tiempo  de  servirla  se  le  aumentan  pepinillos  y 
alcaparras  en  vinagre,  cortados  muy  finos. 

121.  Salsa  de  mostaza. — Se  hacen  reducir  en  una  cacero- 
la tres  ó^cuatro  vasos  de  buen  caldo,  con  sal,  pimienta  y 
ajoa,  hasta  su  mitad;  ae  le  aumenta  una  cucharada  de  moa* 
tasa,  se  paaa  por  tamis  y  ae  sirve  muy  caliente, 

128.  Salsa  mahonesa. — Se  ponen  en  una  oasuela  de  barro 
doa  yemas  de  hnevo  crudas  y  unas  gotas  de  vinagre;  ae  re- 
vuelve bien  con  un  oucharon  de  madera,  y  despuea  ae  va 


47, 

lo  caer  en  ellas  aceite  muy  fino  7  á  un  chorrito  oontí- 
nuo,  poco  mas  que  de  gota  en  gota,  revolviendo  sin  eeaar; 
cuando  se  ve  que 'éste  se  traba  con  las  yemas,  se  le  aumen- 
tarán algunas  gotas  de  limón  6  vinagre,  sin  dejar  de  revol- 
ver, echando  alternativamente  aceite,  y  de  ves  en  cuando 
algunas  gotas  del  ácido.  Esta  salsa  es  muy  fina  y  apetito- 
sa, y  tiene  su  uso  en  muchas  clases  de  platos,  como  pollos 
ó  aves  frías,  y  para  pescados,  etc.  Para  emplearla,  si  está 
demasiado  dura,  se  ablanda  con  un  poco  de  vinagre,  se  la 
sazona  con  sal  y  algunas  veces  pimienta.  Si  acaso  no  tra- 
base el  aceite  con  el  huevo,  y  se  viesen  asi  desunidos,  pón- 
ganse una  6  dos  yemas  en  otra  cazuela  de  barro,  echando 
poco  á  poco  lo  que  se  ha  cortado,  y  revolviendo  sin  parar, 
á  fin  de  que  se  una. 

123.  Salsa  indiana. — Se  pone  en  una  cacerola  mantequi- 
lla, un  poco  de  azafrán  y  dos  chiles  verdes  bien  machaca- 
dos y  se  pasará  al  fuego  para  qne  se  fría  un  poco;  se  le  aña- 
de un  poco  de  caldo  y  otro  tanto  de  salsa;  y  se  dejará  re* 
ducir  hasta*  que  quede  de  una  consistencia  regular;  se  pasa 
por  la  coladera  y  se  pone  al  calor;  cuando  se  va  á  servir  se 
le  aumentará  un  poco  de  mantequilla. 

124.  Salsa  española. — Se  Tiara  hervir  y  se  quitará  la  es- 
puma en  una  cazuela  á  cierta  cantidad  de  caldo,  á  la  que  se 
añadirá  la  sustanoia  de  caza  menor  y  de  aves,  y  si  se  quie- 
re, caldo,  desengrasándolo  y  pasándolo1  por  un  cedazo. 

Se  prepara  también  con  partes  iguales  de  sustancia  y  de 
caldo,  unjraso  de  vino  blanco,  un  manojo  de.  perejil,  una 
cebolleta,  una  hoja  de  laurel,  ana  cabeza  de  ajos,  dos  ola-, 
vos  de  especia,  dos  6  tres  cucharadas  de  aceite,  un  manojo 
de  culantro,  una  cebolla  hecha  ruedas,  todo  lo  cual  deberá 


48 

hervir  por  dos  horas,  y  luego  te  desengrasa  y  se  añade  sal 
y  pimienta. 

126.  Salta  de  piñonea — Se  toma  un  puñado  de  pifiones 
bien  lavados  y  mondados,  y  juntamente  oon  unos  granos 
de  ajo,  cominos  y  una  yema  de  huero  cocida,  se  muele, 
y  desleída  en  caldo  blanoo  6  agua,  se  hace  dar  un  horror 
y  queda  en  estado  de  servir. 

138.  Salsa  de  almendras. — Se  hace  lo  mismo  que  la  ante- 
rior» poniendo  almendras  ejn  ves  de  pifiones. 

127.  Salsa  dé  avellanas,  de  nueces,  tic —Estas  salsas  se 
hacen  absolutamente  lo  mismo  que  la  de  pifiones  y  en  ellas 
se  procurará:  Io ,  que  resalte  la  blancura  á  par  del  gusto 
de  la  fruta;  y  2  ° ,  que  no  están  cargadas  de  especias,  que 
las  harían  estimulantes,  y  no  dejarían  resaltar  su  pasto- 
cidad. 

128.  Salsa  de  perejil  á  la  española. — Tómese  un  manojito 
de  perejil  verde  y  piqúese  bien  con  un  cuchillo  ó*  media  lu- 
na sobre  una  tabla,  ó  muélase  en  el  metate  hasta  que  se 
haga  una  pasta;  deslíase  e*sta  en  un  poco  de  agua,  y  mejor 
será  en  caldo  del  puchero,  añadiendo  vinagre  en  poca  can- 
tidad, un  ajo  machacado  y  unos  cominos. 

129.  Salsa  de  acederas. — Se  toman  unas  hojas  de  acede* 
ra,  un  pedacito  de  pan  frito,  perejil,  ajos  y  cominos,  se 
muele;  después  de  bien  molido  y  hecho  pasta,  se  deslíe  en 
caldo  de  la  olla  y  se  espesa  oon  pan  ó  con  harina  tostada. 
Algunos  suelen  también  poner  en  esta  salsa  pimienta  y  da* 
vo,  y  todo  junto  da  algunos  hervores. 

190.  Salsa  amarilla.— 8e  muele  pan  frito,  ajos  y  comi- 
nos, un  giano  de  clavo  y  unas  hebras  de  asafran;  se  deslíe 


49 

en  caldo,  se  espesa  con  miga  de  pan  y  se  hace  dar  uno»  her- 
vores. 

131.  SaUa  de  jitomate.- Se  pelarán  los  jitomates,  lo  que  * 
se  consigue  poniéndolos  en  agua  á  hervir  un  rato,  para  que 
suelten  la  piel  con  facilidad,  y  se  hacen  jigote,  desliando 
esta  pasta  en  caldo  de  puchero,  y  poniendo  unos  cominos 
molidos.  Si  el  jitomate  se  conservó  en  parte  seca,  será  pre- 
ciso ponerlo  enagua,  y  la  vasija  sobre  un  puchero  que  esto* 

á  la  lumbre,  para  que  se  caliente  con  el  vapor,  teniendo 
cuidado  de  agitarlo  de  cuando  en  cuando  para  que  se  disuel- 
va perfectamente,  y  en  este  estado  puede  servirse. 

132.  Salea  española  á  lo  aldeano.— Rehóguense  despojos 
de  aves  y  ternera  con  manteca,  échense  dos  6  tres  cuchara- 
das de  harina  y  empápense  en  caldo  del  puchero,  añádase 
una  zanahoria,  cebolla,  tomillo,  laurel,  pimienta,  sal  y  cla- 
vo: hágase  hervir  y  échese  media  botella  de  vino  blanco;  al 
cabo  de  dos  horas  se  retira  del  fuego  y  se  cuela  para  sepa- 
rar los  huesos. 

133.  Salta  española.— Póngase  en  una  cacerola  caldo  co- 
lado, un  vaso  de  vino  blanco  y  otro  tanto  de  caldo  del 
puchero,  cebolla,  perejil  en  rama,  ajo,  clavo,  una  hoja  de 
laurel,  dos  cucharadas  de  aceite,  un  polvito  de  culantro  y 
una  cebolla  en  rodajas;  hágase  cocer  todo  junto  y  á  fuego 
lento  por  espacio  de  dos  horas,  espúmese  en  seguida,  y  se 
pasa  por  tamiz,  sazonándolo  con  sal  y  pimienta. 

134  Salsa  blanca. — Se  pone  en  una  cacerola  un  cuarte- 
rón de  mantequilla  fresca,  amasada  con  una  cucharada  de 
harina,  sal  y  pimienta;  se  deslíe  con  un  poco  de  agua,  y  se 
menea  hasta  que  esté  ligada,  sin  dejarla  hervir.  Cuando 
se  haya  retirado  del  fuego,  se  añade  un  poco  de  vinagre  6 

LA  OOCnnUELA  POBLANA. — TOM.    1. 


60 

ramo  de  limón,  yiiie  quiere,  perejil  bien  picado  y  Uva- 
do  y  un  poco  de  núes  moscada.  Cuando  se  quiere  que  esté* 
mee  eapesa,  ae  liga  con  un*  6  doa  yemas  de  huevo. 

135.  Soba  blanca. — Córtete  en  pedazos  pequeños  los  res* 
tos  de  ternera  que  hayan  quedado  del  dia  antes.  Se  clari- 
fica y  reduce  el  caldo  de  otras  carnes  y  aves  con  caldo  del 
puchero,  se  liga  la  salsa  oon  yemas  de  huevo,  y  se  añade 
un  poco  de  manteca  y  perejil. 

136.  Salsa  picante. — Se  pone  en  una  oaoerola  la  mitad  de 
medio  cuartillo  de  vinagre,  un  chuchóte,  un  polvito  de  pi- 
mienta fina,  una  hoja  de  laurel  y  un  poco  de  tomillo;  deje- 
se  reducir  A  la  mitad,  y  después  se  echa  un  poco  de  caldo, 
dejándolo  espesar  hasta  hacerlo  una  papilla  clara. 

137.  Salsa  de  anchoa». — Se  toman  dos  anchoas  lavadas  en 
vinagre,  se  quitan  las  espinas,  y  se  pican  menudamente, 
poniéndolas  en  una  cazuela  con  caldo  ó  sustancia  de  jamón, 
ternera,  pimienta  y  sal;  se  hace  hervir  un  rato,  y  se  cuela; 
cuando  se  sirve  se  añade  un  pooo  de  zumo  de  limón.  Esta 
salsa  para  los  asados  tiene  un  uso  ventajoso  como  salsa  pi- 
cante. 

138.  Salsa  de  pepinillos  en  vinagre. — Se  pican  mucho  los 
pepinillos,  y  poniéndolos  en  una  cacerola  con  un  polvo  de 
harina,  manteca,  pimienta  y  el  suficiente  caldo,  después  del 
primer  hervor  se  separa  de  la  lumbre. 

139.  Salsa  de  vinagre. — Se  pone  en  una  cacerola  canti- 
dad igual  de  caldo  y  vinagre»  sal,  pimienta,  ajos  picados, 
bastante  perejil,  también  picado,  y  se  oolooa  al  fuego,  que 
dé  un  par  de  hervores.  Con  esta  salsa  se  sirven  todas  las 
carnes  asadas. 

:    140.  Salsa  de  laurel. — Se  echan  en  una  cacerola  dos  vasos 


51 

de  vinagre,  tomillo,  laurel,  perejil,  cebolla,  y  bastante  pi- 
mienta, se  tuesta  después  un  poco  de  harina  con  manteca, 
y  se  echa  en  la  salsa,  dejándola  hervir  por  un  cuarto  de  ho- 
ra, y  después  se  pasa  por  tamiz. 

141.  Salsa  de  Rttbert. — Se  pone  manteca  con  una  cuchara- 
da de  hnrina,  y  se  deja  dorar;  después  se  añaden  cuatro  ce- 
bollas picadas,  un  trozo  de  mantequilla,  sal,  pimienta  y  una 
cucharada  de  caldo;  téngase  á  la  lumbre  un  cuarto  de  hora, 
y  antes  de  servirla,  añádase  una  cucharada  de  vinagre  y  un 
poco  de  mostaza;  mené*se  bien  hasta  que  este*  todo  desleído. 
Esta  salsa  es  excelente  para  la  carne  fresca  de  cerdo  6  pavo. 

142.  Salta  común — En  un  cuartillo  de  caldo  se  echa  me- 
dio de  vino  blanco,  sal,  pimienta,  corteza  de  limón,  dos  ho- 
jas de  laurel  y  un  poco  de  vinagre;  se  deja  todo  en  infusión 
á  fuego  lento,  por  diez  6  doce  horas,  después  se  pasa  por 
tamiz  para  que  se  sirva  á  toda  clase  de  aves,  legumbres  y 
peces. 

143.  Salta  del  jefe. — En  un  plato  se  pone  un  trozo  de 
manteca,  perejil  muy  bien  picadito,  sal  y  pimienta;  se  mez- 
cla y  revuelve  todo  bien,  y  después  se  añade  un  poco  de  vi- 
nagre. 

144.  Peltre. — Se  pone  en  una  cacerola  vinagre,  tomillo, 
laurel,  perejil,  cebolleta  y  polvo  de  pimienta;  se  hace  freír 
un  poco  de  pan,  que  se  deslfe  en  caldo;  echando  después  la 
salsa,  debe  hacérsela  hervir  un  cuarto  de  hora,  pasándola 
por  el  tamiz. 

146.  Salsa  de  pobre. — Se  hace  con  caldo  6  grasa,  una  cu- 
charada de  vinagre,  sal,  pimienta  y  perejil;  se  deja  hervir, 
y  después  sirve  para  recalentar  el  asado  6  cooido  que  que- 
dó del  día  anterior. 


62 

146.  Salsa  de  crema. — Fílate  un  cuarterón  de  manteca  y 
una  euoharada  de  harina,  un  buen  picado  de  perejil  y  una 
cebolla  hecha  trozos,  tal,  pimienta  molida,  núes  moteada 
ñipada  y  un  rato  de  nata  ó  leche;  se  menea  mucho,  deján- 
dolo hervir  un  cuarto  de  hora;  esta  salsa  es  muy  buena  pa- 
ra las  papas,  rodaballo,  bacalao,  etc. 

147.  Salsa  especial  llamada  Maitre  cf  hotel. — En  un  pla- 
to se  pone  un  pedazo  de  manteca  con  perejil  picado,  sal, 
pimienta,  nuez  de  especia  y  un  poco  de  cebolla  tierna;  se 
menea  bien  todo  junto  hasta  que  esto*  bien  mezclado;  des- 
pués se  echa  agraz  6  zumo  de  limón  ó  un  poquito  de  vi- 
nagre. 

148.  Salsa  para  toda  clase  de  manjares. — En  medio  cuar- 
tillo de  caldo  se  echa  un  vaso  de  vino  blanco,  sal,  pimienta, 
corteza  de  limón,  laurel  y  un  churrito  de  zumo  de  agraz, 
póngase  en  infusión  sobre  ceniza  caliente  ocho  horas,  al  ca- 
bo de  las  cuales  pueden  ya  usarse  para  guisos  de  pescados, 
menestras,  etc. 

149.  Unjo  para  las  salsas  — Se  hace  derritiendo  on  una 
cazuela  un  poco  do  manteca,  á  la  que  se  añade  una  euoha- 
rada de  harina,  y  cuando  ésta  na  tomado  ol  color  que  se 
desea,  se  echan  los  ingredientes  de  las  salsas  que  en  ellas 
indicamos. 

150.  Salsa  llamada  BechameL — Derrítase  un  pedazo  de 
mantees,  y  en  ella  se  deslíe  una  cucharada  de  harina,  añá- 
dase á  esta  mezcla  poco  á  poco  un  vaso  de  leche  hirviendo, 
meneándolo  todo  sin  cesar  hasta  que  hierva.  Para  hacerla 
mas  superior  se  frío  en  una  cazuela  manteca,  cebollas  he- 
chas ruedas,  zanahorias' y.  perejil;  se  rehoga  bien  y  se  hu- 
medece después  con  leche  hirviendo,  revolviéndolo  sin  ce 


53 

sar;  sazónese  con  sal,  pimienta  y  nuez  moscada  hasta  que 
hierra;  debe  cocer  á  fuego  lento  media  hora,  y  después  se 
cuela 

151.  Salsa  criolla. — Se  pone  una  cazuela  al  fuego  con  tres 
cucharadas  de  manteca  se  echan  después  ajos,  pimienta  y 
cominos  majados,  y  estando  medio  fritos  se  echan  alcapa- 
rras molidas,  se  le  añade  un  poco  de  harina  tostada,  la  sal 
que  se  necesita  y  agua.  Esta  salsa  es  muy  rica  para  em- 
plearla en  pescados,  pichones  y  demás  aves. 

152.  SaUa  de  vinagre  criolla. — Tómese  una  cazuela  y  á 
partes  iguales  de  caldo  y  de  vinagre,  óchese  sal,  tres  ó  cua. 
tro  ajos  picados  menudamente  y  pimienta,  un  manojo  de 
perejil,  y  macháquese,  y  se  pone  todo  á  la  lumbre  como 
una  hora. 

Ea  salsa  que  se  puede  aplicar  á  todo  asado  de  carnes. 

153.  Salm  para  bacalao. — Se  pone  a  cocer  el  bacalao  y 
ya  que  está  bien  cocido  y  limpio  se  muele  para  dos  libras 
de  pescado  una  taza  de  ajos  pelados  y  como  dos  tantos  de 
los  s  jos  de  pan  descortezado.  Se  muele  todo  esto  perfecta- 
mente con  seis  ti  ocho  pimientas  y  un  clavo,  se  pone  á  f reir 
todo  en  una  poca  de  manteca  y  bastante  aceito,  pero  no  se 
fríe  mucho  porque  se  pone  negro.  Ya  que  está  sancochado 
se  le  echa  un  poco  de  agua  y  luego  se  va  colocando  el  baca* 
loo.  Cuando  esta,  se  le  echa  un  poco  de  aceite  por  encima 
dejándolo  espesar  al  gusto. 

154.  Otra  jxtra  penado  llamada  de  la  Sra.  Querin. — Se 
fríen  en  manteca  dos  chiles  mulatos  y  se  muelen;  se  fríe 
ajoá  que  quede  trasparente,  luego  cebolla  y  jitomate  y  se 
le  echa  el  ohile,  un  pedazo  de  pan  frito  y  molido  para  que 
espese  y  luego  se  le  echa  el  pescada 


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166.  Otra. — Se  fríen  en  aceite  gajo»  grandes  de  oebolla, 
aceitunas  con  un  polvo  de  pimienta  y  pan  tostado,  perejil  y 
vinagre,  y  se  muele  todo  junto. 

166.  Salsa  para  bobo. — Se  pica  cebolla,  ajo,  perejil  y 
orégano  y  se  fríe  junto,  se  le  revuelven  unas  yemas  de  hue- 
vo y  un  pedazo  de  pan  frito,  clavo,  pimienta  y  comino,  se 
le  echa  un  poco  de  caldo  del  mismo  bobo,  aceite  y  alcapar- 
ras, y  al  llevarlo  á  la  mesa  se  adorna  con  aceitunas  y  chiles. 

167.  Salsa  para  lengua. — Se  echan  en  manteca  unos  ga- 
jos de  oebolla  gordos,  jitomate  molido  sin  pepitas,  un  polvo 
de  pimienta,  sin  mas  caldo  que  el  que  se  baja  del  metate;  se 
deja  freír  mucho  á  fuego  lento  y  en  esta'  salsa  se  echa  un 
puñado  de  perejil  muy  picado,  un  poco  de  aceite  de  comer 
y  otro  poco  de  vino  de  Jerez.  Échense  luego  las  rebana- 
das de  lengua  cocidas  ó  asadas. 

168.  Otra  para  sestm. — Se  pica  cebolla  muy  menuda,  pe- 
rejil también  muy  menudo,  unas  gotas  de  limón,  un  polvo 
de  pimienta,  unas  yemas  de  huevo  cocido  y  picadas,  y  acei- 
te de  comer.  Con  todo  esto  se  .forma  una  salsa  exquisita 
para  sesos  y  pechuga  de  gallina. 

169.  ¡Salsa  á  lo  guajiro. — Se  pone  A  la  lumbre  una  cazue- 
la que  contenga  media  libra  de  mantee*,  y  cuando  está  en 
buen  temple  se  le  echan  dos  oebollas,  un  poco  de  perejil, 
cuatro  ó  seis  ajos,  todo  bien  picado;  se  le  añade  pimienta, 
seis  granos  molidos,  se  le  sazona  de  sal,  y  agregúese  el  zu- 
mo de  tres  limones  6  el  agrio  de  dos  naranjas.  Es  salsa  de 
un  exquisito  gusto  para  los  asados  de  carne,  y  en  particu- 
lar si  con  ella  se  baña  el  lechon  asado  y  tostado. 

160.  Salta  blanca  á  la  cubana. — Tómense  pedazos  de  ter- 
nera cocida  el  día  anterior;  háganse  pequeños  pedazos:  aña- 


56 

dase  sustancia  de  aves  con  caldo  de  la  olla;  póngase  á  her- 
vir en  una  cazuela;  échense  cuatro  yemas  de  huevos,  un  po- 
co de  perejil  y  manteca,  todo  á  fuego  lento,  hasta  que  esté 
ligada  la  salsa. 

161.  Salsa  picante  á  lo  cubano.  —Se  exprime  todo  el  sumo 
de  dos  limones;  mézclese  con  medio  vaso  de  vinagre,  dáti- 
les picantes  bien  picados;  agregúese  un  polvo  de  pimienta, 
medio  maso  de  perejil,  cuatro  ó  cinco  ajos,  una  hoja  de  lau- 
rel-y  una  pequeña  cantidad  de  cominos;  todo  esto  se  pone 
en  una  cazuela,  haciéndola  hervir  todo  el  tiempo  necesario 
para  que  quede  en  una  mitad,  y  entonces  se  le  añade  como 
dos  tazas  de  caldo  de  sustancia  y  cuatro  cucharadas  de  sal- 
sa habanera;  se  la  deja  que  cueza  un  poco  para  que  espese, 
y  si  se  quiere  lo  haga  mas  pronto,  échese  un  poco  de  harina 
tostada. 

162.  Saina  habanera  cruda. — Se  toma  calabaza  amarilla 
cocida  en  la  olla,  tres  6  cuatro  ajos,  tres  jitomates  asados, 
sin  pellejo,  la  sal  suficiente  y  unos  granos  de  pimienta;  má- 
jese  todo  en  el  metate;  se  le  añade  media  taza  pequeña  de 
vinagre  con  doble  cantidad  de  caldo,  una  cebollita,  un  po- 
co de  perejil  picado  menudamente  y  un  aji  dulce,  todo  cru- 
do y  frío.     Esta  salsa  es  muy  buena  para  las  verduras. 

163.  Mezcla  para  espesar  las  salsas. — Se  rompen  huevos 
frescos  con  cuidado  para  no  reventar  las  yemas,  que  se  se- 
paran de  las  claras.  Se  quitan  las  galladuras,  y  se  deslíen 
las  yemas  en  dos  <S  tres  cucharadas  de  la  salsa  que  se  quie- 
re espesar.  Se  mezcla  bien  el  todo,  y  después  se  echa  des- 
pacio y  meneando  siempre  en  la  salsa,  que  es  menester  ha- 
ber retirado  del  fuego,  y  que  se  vuelve  á  poner  un  instan- 
te para  que  espese,  sin  dejarla  hervir. 


56 

164.  Salsa  rematada. — Se  pxepara  una  mayonesa,  á  la 
que  se  incorpora,  meneándola  largo  tiempo  oon  viveza,  una 
cucharada  de  mostaza,  por  cada  do»  yema»  de  huevo  que 
ae  emplean.  Cuando  está  la  mezcla  hecha,  te  le  añaden 
tres  6  cuatro  cebolletas,  una  cucharada  de  perejil,  picado 
también,  unas  alcaparras,  y  si  se  quiere  unos  pepinillos  en- 
curtidos, picados  en  pedazos.  El  aderezo  de  sal  y  pimien- 
ta debe  ser  mas  considerable  que  para  la  mayonesa. 

165.  Saha  de  ravigote. — Para  hacer  esta  salsa  se  remue- 
len en  el  mortero  yerbas  finas,  como  perejil,  cebolleta,  peri- 
follo y  apio,  oon  ana  cucharada  de  alcaparras,  y  si  se  quiere 
una  6  dos  anchoas.  Cuando  todo  está  hecho  una  pasta,  se 
añade  una  yema  de  huevo  cruda,  sal,  pimienta,  una  cucha<- 
rada  de  aceite  y  otra  de  vinagre,  y   se  sirve  esta  salsa  cou 

la  carne  fría. 

Si  se  la  quiere  cocer,  se  hierve  durante  un  cuarto  de  ho- 
ra con  una  taza  de  caldo  sin  grasa.  Cuando  está  cocida  se 
le  echa  mantequilla  fresca  en  proporción,  amasada  con  me- 
dia cucharada  de  harina  y  se  le  agrega  sal,  pimienta  y  mas 
gotas  de  vinagre.  Se  retira  del  fuego  tan  pronto  como  está 
derretida  la  mantequilla  y  se  sirve. 

166.  Salsa  de  jitomate,  con  mantequilla, — Se  hacen  so- 
freír con  mantequilla  fresca,  jitomates  partidos  en  cuatro 
pedazos  con  algunas  cebollas  hechas  pedazos,  también  y  un 
buen  aderezo  de  sal  y  pimienta.  Cuando  los.  jitomates  es- 
tán bien  sofreídos,  se  les  echa  un  poco  de  caldo  sin  grasa  y 
»e  concluye  la  cocción  á  fuego  lento.  Luego  se  pasa  la  sal- 
sa á  través  de  un  tamiz  6.  colador  fino,  haciéndola  pasar  con 
una  cuchara.    Si  es  demasiado  clara  se  la  hace  reducir  á  un 


67 

fuego  lento,  porque  ae  pega  fácilmente  á  la  cazuela.     Si  pa- 
rece demasiado  eapeaa  ae  la  aclara  con  caldo. 

167.  Saina  mayonesa  ó  bayoneta. — Esta  salsa,  muy  usa- 
da para  acompañar  el  pescado,  las  aves  y  otros  manjares 
que  se  sirven  fríos,  es  al  mismo  tiempo  una  de  las  mas  sen* 
cillas  y  mejores.  Se  baten  en  un  platón  dos  yemas  de  hue- 
vo crudas,  bien  aderezadas  con  sal  y  pimienta.  Casi  gota  á 
gota,  por  decirlo  así,  se  le  va  echando  aceite  español,  en  la 
proporción  de  una  cucharada  por  cada  yema.  La  mezcla 
se  ha  de  batir  un  gran  rato:  no  ha  de  bajar  de  un  cuarto  de 
hora  para  que  quede  bien.  Guando  el  aceite  este*  bien  in- 
corporado á  las*yemas  de  huevo,  se  le  añade  poco  á  poco  el 
proporcionado  zumo  de  limón,  y  á  falta  de  el,  vinagre. 

Algunos  dan  á  esta  salsa  el  nombre  de  bayoneta,  pero  sea 
cual  fuere  el  nombre  que  se  le  dé*,  es  una  misma. 

168.  Otra, — Se  echan  dos  yemas  de  huevo  en  una  ca- 
zuela con  un  poco  de  sal  en  polvo,  y  con  una  cuchara  de 
palo  bien  limpia  y  seca,  se  baten.  Se  echan  tres  6  cuatro 
gotas  de  aceite  de  comer  y  se  sigue  batiendo,  y  de  este  mo- 
do sé  le  sigue  echando  aceite  hasta  que  caiga  chorrito.  Se 
machaca  un  diente  de  ajo,  se  le  echa  y  se  sigue  batiendo 
hasta  que  caiga  en  chorlito,  y  ya  que  está  incorporado  «1 
aceite  con  el  huevo,  se  le  echa  una  cucharada  da  vinagre 
de  Castilla.  Se  vuelve  á  batir  y  se  echa  mas  aceite.  Estas 
operaciones  se  haoen  sin  dejar  de  batir,  pues  se  corta  la  sal- 
sa muy  fácilmente.  Cuando  está  como  puré*,  ya  está  hecha. 
Se  pica  luego  un  poco  de  lechuga  y  se  compone  como  para 
ensalada,  echándole  un  poco  de  pimienta  en  polvo;  se  for- 
ma en  el  platón  como  un  pilón.  Preparado  ya  el  pescado  ó 
el  pollo,  cocido  y  deshuesado,  se  le  va  poniendo  enoima  la 


58 

enlatada  á  que  cubra  el  pedazo  y  encima  la  sala*  que  ae 
preparó,  á  la  que  ae  suelen  añadir  unas  rebanadas  de  hue- 
vo cocido. 

Nota.  Esta  salsa  se  sirve  con  el  pollo  6  con  pescados  que  no 
estén  salados,  como  atún,  salmón,  sardina,  bobo,  bagre,  etc. 

160.  Salsa  para  pescado  ó  bacalao. -43e  asan  unos  jito- 
mates y  se  lavan  como  para  chile  verde;  se  desbaratan  en 
un  plato  y  se  les  echa  cebolla  en  gajos  cocidos,  chícharos 
cocidos,  alcaparras,  aceitunas,  chiles  en  vinagre  picados,  lo 
mismo  que  las  aceitunas  qué  han  de  ser 'gordales,  orégano, 
tomillo,,  pimienta  en  polvo,  vinagre  y  aceite.  Revuélvese 
en  todo  esto  el  pescado  frito.  -    » ■  •• 

Si  el  guiso  es  de  bacalao,  después  de  cocido  se  limpia,  se 
echa  aceite  en  una  sartén  y  bastantes  ajos  molidos  á  que 
se  frían  y  en  esto  se  sancocha  el  bacalao,  que  con  todo  y 
aceite  se  echa  en  la  salsa.  • 

170.  Salsa  ordinaria  para  pescada.  ^Se  hace  un  frito 
de  jitomates,  cebollas  en  rebanadas,  perejil  y  especias  mo- 
lidas, ajos,  chiles  encurtidos,  vinagre  y  el  agua  necesaria  y 
allí  se  echan  las  tajadas  de  pescado  ya  cocidas  y  se  acaba 
de  sazonar. 

« 

171.  Salsa  de  jitomate  d  la  italiana.— 8*  emplea  igual 
cantidad  de  jitomates  y  cebollas,  y  se  aderezan  con  una  ho- 
ja de  laurel,  pimienta  machacada  y  una  cucharada,  6  me- 
dia, según  la  cantidad  de  jitomates,  >  de  polvo  de  azafrán. 
Se  mojan  loa  jitomates  y  cebollas  con  caldo  del  puchero  que 
tenga  grasa,  y  se  le  pone  la  mantequilla  necesaria.'  Debe 
cocer  á  fuego  lento,  meneándola  con  una  cuchara  de  palo 
para  que  no  se  pegue.  Se  cuela  por  tamiz  empleando  para 
ello  una  cuchara  de  pala    Bs  muy  excitante. 


59 

172.  Otra  solead  la  maUre  <F  hotel — Se  emplea  aquí  la 
palabra  aalaa  para  conformarse  al  uso,  porque  no  se  trata  de 
una  salsa  en  el  verdadero  sentido  de  la  palabra.  Se  amasa 
un  trozo  de  mantequilla  con  sal,  pimienta,  un  puñado  de 
perejil  picado,  algunas  cebollas  y  unas  cuantas  gotas  de  vi- 
nagre 6  zumo  de  limón.  Preparado  todo  se  echa  en  las  le- 
gumbres cocidas  en  agua  ó  bien  en  los  pescados  asados  en 
las  parrillas  ó  simplemente  cocidos.  Bs  preciso  que  estos 
manjares  estén  muy  calientes  para  que  se  derrita  la  mante- 
quilla, pues  de  otro  modo  es  preciso  ponerlos  do  nuevo 
en  el  fuego.  Es  una  de  las  maneras  mas  sencillas  y  mas 
rápidas  para  preparar  manjares  magros. 

173.  Observación  importante  sobre  el  modo  de  espesar  las 
salsas. — Para  espesar  las  salsas,  se  deslíen  en  una  6  dos  cu- 
charadas de  la  que  tiene  el  guiso,  una  6  dos  yemas  da  huevo, 
y  se  menean  hasta  que  se  hayan  mezclado;  después  se .  va 
echando  despacio  en  el  guisado,  pero  siempre  meneándolo. 
Para  hacer  el  dorado  de  las  salsas  se  pone  un  poco  de  man- 
teca en  una  cacerola,  se  añade  una  cucharada  de  harina,  y 
se  da  vueltas  á  todo  hasta  que  adquiera  el  color  que  desea. 

CARNES. 

174.  Modo  de  ablandar  la  carne  antes  de  prepararía — An- 
tes de  ponerla  á  asar  6  á  guisar  se  le  bate  á  machaca  bien 
con  mucha  fuerza  durante  un  minuto,  con  un  rodillo  de  ma- 
dera; consistiendo  en  esta  sencilla  operación  el  secreto  para 
que  la  carne  esté*  blanda  y  delicada. 

175.  Biftek. — Plato  el  mas  favorito  de  la  cocina  inglesa, 


60 

y  un  alimento  en  el  dia  muy  coman  en  toda*  partes,  prin- 
cipalmente para  almorzar.  Se  prepara  con  un  pedazo  de  so- 
lomillo 6  lomo  de  Taca  cortado  al  través,  después  de  limpio 
de  la  parte  nerviosa  que  contenga,  y  aplastándolo  con  una 
paleta  de  hierro  6  madera  hasta  dejarlo  del  grueso  de  un 
dedo.  Así  preparado  se  empapa  en  mantequilla  derretida, 
y  se  pone  en  las  parrillas  á  buen  fuego  sin  llama;  no  se  vuel- 
ve del  otro  lado  hasta  que  principie  á  tostarse.'  La  prepara- 
ción de  un  buen  biftek  requiere  que  el  solomillo  no  sea  de 
carne  matada  en  el  mismo  dia;  que  sea  asado  en  el  momen- 
to que  sea  necesario,  sin  sal,  servirlo  á  la  mesa  pronto;  por 

que  de  lo  contrarío  pierde  todo  su   mérito,  tanto  por  la 

.i. 
tardanza  en  comerlo,  como  porque  el  fuego  lo  pasa.  El  mé- 
rito suyo  consiste  también  en  que  se  reconcentre  en  su 
interior  todo  el  jugo  de  la  carne,  á  fin  de  que  esté  mas 
tierno  y  nutritivo,  y  después  de  asado  sazonarlo  con  sal. 
Cuando  se  aparte  del  fuego  se  colocará  en  el  platón,  que 
debe  estar  algo  caliente,  donde  se  habrá  puesto  una  salsa 
compuesta  de  mantequilla,  sal,  pimienta  en  polvo,  perejil 
muy  picado  y  un  poco  de  zumo  de  limón,  empapando  en 
esta  misma  salsa  el  biftek  por  sus  dos  lados. 

176.  Otro. — Dispuesta  la  carne,  limpia  y  sin  nervio,  se 
maja  dándole  una  forma  cuadrada  ó  redonda.  Májese  des- 
pués un  poco  de  sal  y  ajo,  revuélvase  con  un  poco  de.  man- 
teca caliente  6  aceite  crudo,  y  después  de  bien  disuelto  se 
unta  y  roda  bien  la  carne  con  una  pluma;  téngase  así  dos 
horas;  y  después  á  fuego  muy  fuerte  se  pone  la  carne  en  las 
parrillas,  dándole  dos  vueltas  y  rociándole  con  su  jugo  y  un 
poco  do  manteca.     Se  sirve  muy  caliente. 

177  a   Biftek  con  cebolla. — Después  de  preparado,  «eco- 


61 

loca  en  la  sartén  con  mantequilla,  sal,  y  un  poco  de  cebolla 
muy  picada;  déjesele  asar,  póngasele  la  salsa  y  déjese  con- 
sumir ésta  algún  tiempo  al  fuego,  apártese  y  sírvase  en  un 
plato. 

178.  Biftek  con  saina  de  anchoa*. — Cuando  este*  asado  se 
le  pone  una  salsa  de  anchoas,  en  la  que  se  deja  cocer  un 
rato  para  que  tome  el  sabor  de  ellas.    . 

179.  Biftek  con  jitomates. — Estando  asado  se  le  aumenta 
una  salsa  de  jitomates  que  esté  clara,  en  la  que  tambieu  se 
deja  oocer  lentamente  hasta  que  se  espese. 

Todos  los  bifteks,  asados  como  queda  dicho,  pueden  ser- 
virse con  puré  de  papas,  legumbres,  manteca  preparada  con 
anchoas  6  con  berros  sazonados  con  vinagre  y  sal,  etc. 

180.  Biftek  del  momento.— &e  parte  la  ternera  muy  del- 
gado y  luego  se  apalea  mucho,  se  le  unta  limón  y  se  san- 
cocha en  aceite  y  manteca.  Para  servirlo  se  le  pone  encima 
aceitunas,  alcaparras,  cebolla  rebanada,  ajos  en  vinagre,  to- 
millo, orégano,  unas  rebanadas  de  limón  6  de  naranja  y 
queso  rallado. 

181.  Receta  de  biftek, — Se  toma  la  pulpa  de  vaca,  se  re- 
bana y  se  machaca  con  un  mazo  de  palo;  so  tiene  ya  preve- 
nida la  agua  con  laurel,  orégano,  tomillo,  clavo,  pimienta  y 
canela,  un  poco  de  vinagre,  su  correspondiente  sal  y  se  pone 
á  cocer  hasta  que  esté  blandita.  Luego  se  saca  y  so  sancocha 
con  manteca;  ya  hechas  estas  operaciones  se  pone  en  un 
platón  y  se  adorna  con  vinagre,  aceite,  cebolla  en  rebana- 
das y  un  polvo  de  orégano. 

182.  Otro  de  naranja. — Se  toma  la  pulpa  y  se  rebana  muy 
delgada,  se  previene  una  cazuela  con  bastante  agua  en  la 
que  se  echará  manteca,  aceite  un  poco  y  vinagre,  el  jugo 


62 

de  tres  6  cuatro  naranjas  cocidas,  rebanadas  de  jamón,  dos 
ohiles  anchos,  ajo,  laurel,  tomillo,  orégano,  sal,  pimienta, 
un  pedacito  de  atacar,  clavo  y  canela,  y  estará  hirviendo 
hasta  que  sancoche;  ya  que  se  va  á  servir  se  le  echan  alca- 
parras y  aceitunas. 

183.  Biftek — Se  fríe  la  carne  en  mantequilla  con  sal  y 
pimienta,  se  dora  muy  bien  harina  en  la  mantequilla  que 
queda  en  la  cazuela,  después  se  desbarata  en  caldo  y  se  le 
echa  un  polvo  de  pimienta,  perejil  picado,  zumo  de  limón, 
vino  tinto- y  nuez  moscada.  Se  echan  en  todo  esto  los  bif- 
Uk*,  y  si  no  queda  la  salsa  de  color  carmelita  se  le  agrega- 
rá un  poco  de  azdcar  quemada. 

1H4.  Otro. — Se  cortan  las  tajadas  del  muslo  de  media 
pulgada  de  grueso;  se  ponen  á  calentar  las  panillas,  ya  que 
están  muy  calientes  se  embarran  con  grasa  y  se  ponen  á 
fuego  vivo;  se  coloca  en  ellas  las  tajadas  de  carne  y  se  de- 
jan aaar  hasta  que  empiecen  á  ponerse  de  color  oscuro  y  se 
vuelven  del  otro  lado  para  que  tomen  el  mismo  color.  Se 
colocan  luego  en  un  plato  que  esté  caliente  y  se  dejan  allí 
un  rato,  colocando  una  capa  de  mantequilla  entre  rebana- 
da y  rebanada. 

Después  se  les  echa  un  poco  de  pimienta  y  se  colocan  de 
nuevo  «obre  la  parrilla  hasta  que  estén  bien  cocidas.  Se  pi- 
ca una  cebolla  muy  menuda  y  se  echa  en  una  cucharada  de 
agua  caliente  que  se  vacía  sobre  la  carne  antes  de  servirla. 

185.  Modo  de  ablandar  la  carne. — Hay  muchas  cocineras 
que  no  quitan  la  carne  del  fuego  sino  cuando  está  muy  coci- 
da, la  embarran  luego  con  pimienta,  y  le  dan  vueltas  conti- 
nuamente en  un  fuego  vivo,  engrasando  frecuentemente  la 
carne,  que  sale  así  exquisita.     Pero  téngase  presente  que  el 


63 

gran  secreto  para  hacer  buenos  biftehe  consiste  en  cocerlos 
en  fuego  muy  vivo,  voltear  la  carne  á  menudo  y  hacerlo  con 
violencia  pues  la  carne  endurece  cuando  está  mucho  tiempo 
en  el  fuego. 

186.  Vaca  á  la  moda. — Se  toma  un  buen  trozo  de  vaca, 
se  le  quitan  los  huesos,  se  mecha  con  tiras  de  tocino,  se  le 
agrega  perejil  y  cebolla  picados,  sal,  pimienta  y  especias  fi- 
nas. En  la  cacerola  se  pone  vino  blanco,  tocino  en  pedaci- 
tos,  ajos  picados  bien  menudos,  cebollas  pequeñas  enteras, 
rodajas  de  zanahorias,  pimienta  en  grano,  y  un  poco  de  sal, 
se  coloca  la  carne  sobre  estos  ingredientes,  se  tapa  bien  la 
cacerola  y  se  pone  á  fuego  lento;  se  deja  así  cinco  6  seis  ho- 
ras, y  se  sirve  cuando  está  en  sazón. 

187.  Vaca  en  salsa  espesa.  —Se  pone  en  una  cazuela  6  ca- 
cerola la  carne  partida  en  lonjas  delgadas  con  un  pedazo  de 
mantequilla:  después  de  derretida  ésta,  se  añadirá  un  buen 
puñado  de  harina,  se  menea  y  se  deshace  con  un  poco  de 
agua  6  caldo,  se  sazona  con  sal,  pimienta  y  un  manojito  de 
perejil,  y  antes  de  servirla  se  le  echan  huevos  batidos  y  un 
poco  de  •viuagre. 

188.  Vaca  mechada.  — Póngase  á  remojo  la  carne,  después 
de  bien  quitados  los  pellejos,  se  colocan  dentro  unos  trozos 
pequeños  de  tocino  de  trecho  en  trecho;  se  pone  en  nna  ca- 
zuela ó*  cacerola  la  manteca,  y  cuando  esté  caliente  échese 
la  carne,  que  no  debe  revolverse;  se  cubre  con  una  tapade- 
ra de  hierro,  y  se  pone  á  fuego  lento,  echando  también  lum- 
bre sobre  la  tapadera;  después  se  dispone  una  salsa  de  ace- 
deras cocidas,  que  se  echará,  no  encima  de  la  carne,  sino  á 
sus  costados,  y  se  sirve;  debe  tenerse  ouidado  de  no  dejar 
que  se  consuma  el  jugo. 


64 

189.  Lampreado  de  «ico.— Par»  preparar  mío  grifado 
se  pica  la  carne  en  pedaeitos  oomo  nueces,  7  después  tocino 
que  se  fríe,  y  con  él  cebolla,  te  pone  todo  á  rehogar  en  la 
sartén,  echando  un  poco  de  pimienta;  en  seguida  se  pone 
en  una  olla  á  fuego  lento  y  se  le  da  vueltas,  echando  nn  po- 
co de  agua  para  que  cuesa;  se  satona  oon  sal,  clavillo,  cane- 
la, un  puñado  de  perejil  y  un  poco  de  azafrán;  si  se  quiere 
hacer  una  salsa  pronto,  se  desatan  unas  yemas  en  corta  can- 
tidad de  vinagre,  y  se  baten  oon  caldo  tibio  para  que  no  se 
cuajen;  se  las  echa  en  el  guisado,  procurando  que  no  hierva, 
y  se  sirve. 

190.  Pulpa  de  vaca. — Se  parte  en  rebanadas  la  pulpa,  se 
echa  en  una  cazuela  una  cucharada  de  manteca,  cebolla, 
chorizos,  jamón  y  ajo;  la  cebolla  debe  picarse  con  un  poco 
de  perejil,  orégano  y  tomillo;  se  le  echa  un  poco  de  culan- 
tro verde,  se  frie  todo  junto,  se  le  eoha  agua,  clavo,  pimien- 
ta, canela,  y  unas  rebanadas  de  pan  frito  en  manteca,  todo 
esto  molido,  y  se  procura  qne  quede  espeso  para  llevarlo  á 
la  mesa.  Al  ir  á  comerlo  se  le  agrega  un  poco  de  aceite,  al- 
caparras, aceitunas  y  chiles  en  vinagre. 

191.  Otra  pulpa. — Se  parte  un  pedazo  de  pulpa  y  se  me- 
cha con  papada  muy  tupida,  se  pone  á  cocer  con  un  mano- 
jo de  laurel,  otro  de  perejil,  una  ó  dos  cebollas,  clavo,  pi- 
mienta y  una  nuez  moscada.  Así  que  está  cocida,  se  baja 
de  la  lumbre,  pero  antes  se  deja  oojMumir  el  caldo  ai  tiene 
mucho.  Se  le  quitan  luego  todas  (as  hojas  para  que  quede 
la  carne  muy  limpia,  y  en  la  manteca  que  queda  se  echa 
un  poco  de  harina  dejándola  que  tome  un  color  subido.  Ta 
que  está  se  le  eoha  la  carne. 

192.  Otro  guisado  dé  pulpa,  llamado  de  regalo. — Se  lava 


65 

muy  bien  la  palpa  de  vaca,  se  rebana,  te  clavetea  con  ja- 
món, ajos  y  especias  de  todas,  se  echa  en  agua  de  sal  un 
día  entero,  otro  dia  en  vinagre  y  otro  dia  se  tiene  todo  es- 
to junto  con  la  carne.  Luego  se  aprensa  la  carne;  ya  apren- 
sada se  pone  á  cocer  en  una  olla,  que  se  tapa  muy  bien.  Una 
ves  cocida  la  carne  se  rebana,  se  pone  en  un  platón,  se  le 
echa  vinagre,  aceitunas,  alcaparras,  aceite,  chiles  en  vina- 
gre, pimienta  molida,  cebolla  rebanada  y  se  sirve. 

193.  Fricando  seco  de  pulpa»  de  ternera. — Se  redondean 
las  pulpas  de  pierna  á  manera  de  quesos,  se  echan  en  sumo 
de  naranja  j  agua,  y  al  dia  siguiente  se  secan  con  un  lienzo 
y  se  clavetean  con  tiritas  largas  de  jamón,  poniéndolas  lue- 
go á  cocer  en  una  casuela  oon  un  tanto  de  agua  y  otro  de 
vinagre,  unas  hojas  de  laurel,  tomillo,  ajos  machacados, 
bastantes  especia»,  una  cucharada  de  manteca  y  unas  reba- 
nadas de  zanahorias.  Así  que  está  oooida  la  carne,  se  unta 
con  aceite  y  manteca,  y  se  pone  á  dos  fuegos  áque  se  medio 
dore.  Debe  ir  á  la  mesa  en  una  salsa  de  quelites  verdes  y 
sazonados  oon  ajos,  cebolla,  cominos  y  agua  en  poca  canti- 
dad, pues  ha  de  quedar  seco.  Al  colocarse  la  carne  en  la 
salsa  se  adorna  oon  unas  ruedas  de  zanahoria. 

194.  Vaca  con  yerba*. — En  un  plato  ouyoiondo  tenga 
manteca  con  yerbas  finas  picadas  y  ralladuras  de  pan,  se 
pone  la  vaca  cocida  en  trozos  lo  mas  pequeños  que  se  pue- 
da, se  añaden  por  encima  yerbas  finas  y  pedacitos  de  man- 
teca, y  otra  nueva  capa  de  ralladuras,  y  el  todo  se  expone  á 
un  fuego  templado,  cubierto  con  una  tapadera  de  hierro, 
sobre  la  que  se  echarán  ascuas;  y  cuando  el  trozo  está  ya 
cocido  se  sirve,  pero  añadiendo  también  pepinillos  6  alca- 
parras. 

la  ooonnuu.  foslaha. — tom.  i. 


66 

195.  Vaca  guisada. — Se  parta  un  pedazo  de  carne  de 
pierna  en  pedazo*  pequeños;  en  seguida  te  echan  en  la  olla, 
con  tal  y  hojas  de  laurel;  se  pica  tocino  entre  gordo  y  ma- 
gro, se  frie  y  echa  también  en  la  olla;  después  se  majan  ajos 
con  pimienta;  disolviéndolos  en  un  poco  de  agua,  y  se  agre- 
gan al  guisado;  se  pone  aceite  para  rehogarlo  alumbre  man- 
sa; cuando  parezca  conveniente  se  añade  el  caldo  suficiente 
y  se  sazona  con  sal,  especias,  perejil  y  jitomate. 

196.  Vaca  en  pepitoria, — Se  rebana  la  vaca  á  lo  largo  y 
se  le  meten  adentro  nueces,  piñones,  almendras,  pimienta, 
yerBabuena,  perejil  y  orégano.  Se  muele  chile  ancho  con 
cominos;  se  va  untando  la  vaca  con  el  chile,  y  ya  untados 
los  pedazos,  se  van  envolviendo  y  amarrando  con  hebras. 
Se  tiene  prevenida  una  olla  con  unos  palitos  en  el  asiento 
para  que  no  se  queme  el  guiso.  Se  van  poniendo  muy  bien 
los  envoltorios  de  carne,  y  para  que  hierva,  se  echa  agua  y 
vinagre,  tanto  de  uno  como  de  otro,  lo  que  fuere  necesario 
para  que  cueza  y  la  sal  correspondiente.  Ya  puesto  todo,  se 
tapa  la  olla  con  masa,  se  pone  á  hervir  y  se  saca  al  otro  dia» 
Se  tiene  prevenido  chile  ancho  molido  para  untar  con  él,  to- 
dos los  envoltorios;  luego  se  fríen  en  manteca  y  á  la  salsa 
se  le  echa  pimienta,  vinagre  y  pan  tostado. 

197.  Guisado  de  carie  cocida  antee. — Se  rehogan  cebollas 
picadas  en  ruedas,  con  manteca,  añadiendo  un  poco  de  cal- 
do, y  se  echa  á  cocer  en  esto  la  carne  hecha  pedacitos;  ha- 
biendo cocido  un  poco,  se  echa  un  poquito  de  vinagre  ó 
mostaza  y  se  sirve. 

198).  Otro  guisado. — Se  pica  la  carne  en  pedazos  peque- 
ños y  se  pone  á  rehogar  en  una  cacerola,  sartén  6  pucheror 
con  aceite  6  manteca,  cebolla  picada,  un  poco  de  pimiento 


67 

dulce,  ajos,  pimienta,  jitomates  picados  después  de  haber- 
les quitado  el  pellejo  y  la  sal  correspondiente;  se  pone,  á 
cocer  á  fuego  lento  con  su  propio  caldo,  removiéndolo  de 
cuando  en  cuando;  después  se  añade  agua,  caliente  ó  caldo 
de  olla,  echando  á  la  yes  un  poco  de  laurel  y  algunas  papas 
partidas  en  pedazos  gruesos,  dejándolo  que  cueza  el  tiempo 
necesario. 

199.  Otro. — Se  rebana  la  pulpa,  se  echa  en  una  cazuela 
con  bastante  manteca  y  unas  rebanadas  de  jamón,  bastante 
cebolla  picada,  ajo,  perejil  picado,  orégano,  tomillo,  unas 
hojas  de  yerbabuena  y  un  poquito  de  culantro  verde.  Se 
deja  freir  todo  y  después  se  le  echa  agua;  se  muele  clavo, 
canela,  pimienta  y  unas  rebanadas  de  pan  frito,  que  se  echa 
todo  junto  debiendo  quedar  el  caldo  algo  espeso.  Pero  an- 
tes de  servir  el  guisado  se  le  echa  un  poco  de  aceite  y  se 
adorna  como  es  costumbre,  con  yerbas. 

200.  Otro  en  crudo. — Se  echa  manteca  en  una  cazuela  y 
cuando  está  muy  caliente  un  poco  de  ajo  rebanado,  cebolla 
rebanada  también  y  jitomate  picado,  perejil  y  unas  hojas 
de  yerbabuena.  Ya  que  está  frito  todo  esto  se  le  echan  re- 
banadas de  carne  cruda  lo  mas  delgadas  que  se  pueda,  y 
otras  de  jamón.  Se  deja  freir  y  luego  se  echa  un  tanto  de 
vinagre  de  Castilla  y  otro  de  agua.  Se  muele  clavo,  canela 
y  pimienta,  y  antes  de  servirlo  se  roda  con  un  poco  de  vino 
do  Jerez,  adornándolo  con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

201.  Otro  de  naranja  agria. — Se  corta  la  carne  on  reba- 
nadas delgadas,  se  echan  en  una  cazuela,  se  embarran  de 
manteca  y  se  espriine  sobre  ellas  una  naranja  agria,  un  po- 
co de  vinagre  y  la  sal  correspondiente.  Se  deja  un  dia  en 
esta  infusión.     Después  se  saca,  se  enjuga  y  echa  en  man- 


68 

teca  con  unas  rebanadas  de  jamón»  chorizos,  nnot  dientes 
de  ajo  enteros,  oebolla  rebanada,  tomillo,  orégano  y  laurel, 
Se  fríe  todo  junte»  y  se  le  agrega  agua  y  vinagre,  clavo  mo- 
lido, canela,  pimienta  y  unas  rebanadas  dé  pan  frito.  El 
caldillo  ha  de  quedar  espeso  yantes  de  servirlo  se  le  echa 
vino  de  Jerez.    Se  adorna  con  chiles,  alcaparras,  etc. 

203.  Vaca  compueda  á  la  replano. —Se  calculan  cuatro 
onsas  de  manteca  de  puerco  para  dos  libras  de  vaca,  lo  cual 
se  prepara  en  primer  lugar  poniendo  en  una  cazuela  la  man- 
teca con  unas  hojas  de  laurel,  un  poco  de  perejil,  cuatro  ó 
cinco  ajos,  como  dos  cucharadas  de  pan  rallado:  échese  la 
vaca  cocida  anteriormente,  pártase  en  pequeños  pedasos  y 
póngase  la  cazuela  á  sofreír  con  poco  fuego;  procúrese  ta- 
par con  una  tapadera  de  hierro,  en  la  que  se  pone  lumbre 
para  que  se  sofría  el  guisado  por  igual;  se  deja  como  una 
hora;  se  sazona  y  añaden  unas  alcaparras,  dejándolo  al  fue- 
go un  pequeño  rato.    Este  plato  ha  de  servirse  caliente. 

203.  Foca  en  venaton. — Se  toma  la  carne  maciza,  se  cla- 
vetea con  jamón,  ajo,  pimienta  y  clavo,  se  amarra  con  un  - 
hilo,  se  echa  en  una  olla  un  tanto  de  vinagre,  otro  de  agua 
y  otro  devino  de  Jerez.  Se  mezcla  después  orégano,  tomi- 
llo, almoraduz,  unas  hojas  de  laurel,  toronjil,  una  remita 
de  romero,  pimienta  de  Tabasco,  comino,  clavo,  canela,  sal, 
a  jengibre  tostado,  unas  pepitas  de  chile;  un  jitomate  picado, 
cabezas  de  ajo  y  cebollas,  se  tapa  la  olla  con  un  plato  y  un. 
cotense  encima,  se  pone  á  cocer  hasta  que  se  seque;  se  ador- 
na con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras,  rebanadas  de  cebolla 
y  hojas  de  lechuga. 

204.  Otra. — Se  desangra  la  carne,  se  pica  yerbabuena, 
perejil,  ajo  y  jame*;  mezclado  esto  se  mete  en  la  carne  con 


69 

el  cuchillo,  agregándole  clavo  y  pimienta.     Se  prepara  lue- 
go en  un  plato  vinagre  con  sal,  aguardiente,  unoa  trooitoa 
de  naranja,  limón,  lima  agria  en  rebanadas  mennditas,  to 
millo,  romero,  perejil,  mejorana  y  laurel.     Se  muele  cañe 
la,  clavo  y  pimienta  y  se  echa  la  carne  en  el  caldo  y  se  deja 
en  infusión  toda  una  noche.  Al  otro  dia  se  hace  otro  caldi 
lio  igual  al  anteriormente  explicado  y  se  le  echa  la  carne 
que  se  pone  á  cocer.     Ta  que  está  cocida  se  fríen  ajos  en 
manteca  y  se  les  echa  la  carne,  que  se  adorna  como  la  an 
terior. 

205.  Vaea  escabechada. — Para  tres  libras  de  carne  se  echa 
medio  cuartillo  de  aceite,  dos  cuartillos  de  vinagre  corrien- 
te, pero  bueno,  dos  cabezas  de  ajo  asado  en  el  rescoldo,  un 
poco  de  pimienta  martajada,  tomillo,  mejorana  menuda  y 
un  poco  de  laurel-,  se  rebana  la  carne  y  se  golpea  bien  á  que 
quede  del  grueso  de  dos  dedos  y  se  van  friendo  las  rebana* 
das  en  aceite,  procurando  que  queden  blanquiscas  y  no  tos- 
tadas. Luego  se  echan  en  una  olla  con  el  vinagre  las  yer- 
bas y  las  dos  cabezas  de  ajo  enteras  y  limpias.  Si  la  carne 
está  cocida  y  el  vinagre  no  se  ha  consumido,  se  destila  para 
que  solo  quede  el  aceite;  se  le  echa  sal  al  gusto  y  se  deja  en 
la  olla  dos  6  tres  dias  6  mas  hasta  que  se  enfrie.  Guando 
se  sirve  se  le  echa  mas  aceite  y  vinagre  de  Castilla.  Se  po- 
ne en  la  mesa  fría  y  se  adorna  con  aceitunas,  alcaparras  y 
chiles. 

206.  Otra  veractuzana. — Se  corta  carne  macisa  en  peda- 
sos  grandes  y  se  le  quitan  los  pellejos,  se  echa  en  agua  fría 
á  que  desangre,  se  lava  y  rebana  y  luego  se  limpia  con  un 
lienzo  para  que  no  tenga  sangre  alguna.  Se  muele  clavo, 
pimienta,  canela  y  un  poco  de  sal;  se  parten  tiras  de  jamón, 


70 

se  mondan  ajos,  tomillo  seco  y  todo  ie  revuelve.  Se  clare- 
tes la  carne  con  el  jamón  revuelto,  con  las  especias  molidas 
y  lo  mismo  se  hace  con  los  ajos.  Claveteados  ya  los  peda- 
sos  de  carne,  se  lian  con  hilo  fuerte  y  se  echan  en  una  olla 
CDn  agua  suficiente,  una  botella  de  vinagre  mexicano  y  un 
•poco  del  de  Castilla,  diez  y  ocho  6  veinte  cabezas  de  ajo, 
un  puñado  de  pimienta  de  Castilla,  un  poco  de  laurel,  otro 
de  tomillo  con  todo  y  palos,  con  saL  Se  pone  al  fuego,  se 
tapa  la  olla  que  de  cuando  en  cuando  se  menea  para  que  la 
carne  no  se  pegue.  Ya  que  está  cocida  se  saca  y  se  deja  en- 
friar. Una  vea  fría  se  le  quita  el  hilo,  se  corta  en  rebana- 
das del  grueso  de  un  dedo,  se  echa  en  una  cazuela  vinagre 
mexicano  y  otro  poco  del  de  Castilla  y  una  botella  de  acei- 
te, se  escurren  las  yerbas,  ajos  y  demás  que  tiene  la  olla 
donde  se  coció  la  carne.  Se  le  pone  sal  al  gusto  y  en  un  ba- 
rrilito  ó  en  la  olla  se  coloca  una  capa  de  carne  y  otra  de  ajo 
y  especias  y  se  deja  así  ya  en  estado  de  comerse. 

207.  Vaca  apreruada* — Se  mecha  la  carne  con  jamón, 
dientes  de  ajo,  olavo,  canela  y  pimienta  y  se  le  echa  sal.  Se 
deja  asi  cuatro  dias  volteándola  en  todos  ellos,  después  se  po- 
ne un  dia  entero  entre  dos  tablas,  y  se  cuece  en  agua  y  vi- 
nagre; ya  cocida  se  vuelve  á  aprensar  entre  las  tablas  y  se 
envuelve  en  una  servilleta,  quedando  en  estado  de  comerse. 

208.  Otra» — Se  cejen  pedazos  grandes  de  pulpa  y  se  ola- 
vetean  con  bastante  jamón,  dientes  de  ajo,  pimienta  y  cla- 
vo entero;  se  echa  en  una  olla  pon  bastante  vinagre  del  co- 
rriente que'está  bueno  y  un  poco  de  agua.  Se  agregan  otras 
cabezas  de  ajo  machacado,  orégano,  tomillo  y  laur*'>  P1* 
mientas  de  Tabasoo  y  la  sal  correspondiente.  Se  tapa  la  olla 
á  que  no  evapore  y  se  pone  á  hervir.    Ta  cocida  la  carne  se 


71 

saca,  se  pone  en  un  platón  y  se  lleva  al  aire  libre,  lo  que  es 
bastante  para  que  quede  como  aprensada.     Para  oomerla  se 
corta  en  rebanadas  muy  delgadas  que  se  colocan  sobre  ho 
jas  de  lechuga  y  se  le  echa  aceite,  vinagre,  un  polvo  de  pi 
mienta,  orégano,  tomillo,  cebolla  en  rebanadas,  aceitunas 
alcaparras  y  chiles  en  vinagre. 

200.  Otra  vaca  aprensada. — Se  parte  la  carne  en  reba 
nadas,  se  echa  en  una  cazuela  con  un  poco  de  vinagre  comen 
te,  sumo  de  naranja  agria  y  un  poco  de  sal.     Se  deja  en  in 
fusión  dos  6  tres  días  y  después  se  saca  y  aprensa.     Se  em 
barra  una  cazuela  con  manteca  y  se  pone  una  capa  de  carne 
y  otra  de  cebolla  rebanada,  orégano,  tomillo,  mejorana,  re 
bauadae  de  jamón  y  chorizos,    Se  le  agrega  clavo,  canela 
pimienta,  ajengibre  y  un  poco  de  nuez  moscada  rallada,  y 
se  deja  freír  todo  junto.     Se  le  echa  agua  y  vino  de  Jerez 
en  proporción  de  la  carne.     Se  deja  cocer  á  dos  fuegos  y  ha 
de  quedar  como  adobo.  Se  adorna  con  chilitos,  cebolla,  etc. 

210.  Filete  con  manUqxitila. — Se  toma  un  filete,  y  entero 
se  aplana  hasta  que  quede  del  grueso  de  un  dedo,  y  rociado 
con  sal,  pimienta  y  limón,  se  deja  hasta  la  hora  de  comer. 
Guando  se  sirve  la  sopa  se  coloca  sobre  las  parrillas  y  se  do- 
ra, dándole  vueltas  de  una  parte  para  otra;  en  estando  do* 
rado  se  tiene  mantequilla  derretida  y  se  mezcla  con  la  sus- 
tancia que  ha  destilado  el  filete  al  asarse,  y  se  le  roda  por 
encima,  empanándolo  por  un  lado  y  otro.  Se  sirve  con  pa- 
pas fritas  6  tostadas. 

211.  Otro  filete. — Se  mecha  la  carne  con  la  aguja  de  me* 
char;  se  pone  á  quemar  manteca  en  una  cacerola  y  se  dora 
un  poco.  Se  le  echan  uno  ó  dos  dientes  de  ajo  partidos  á 
lo  largo,  una  cebolla  partida  del  mismo  modo,  unas  zanaho- 


72 

rías  en  pedazos,  an  nabo  partido  también,  dos  ó  trea  cla- 
vos, una  hoja  de  laurel  y  dos  6  tres  pimientas  grandes. 
Todo  esto  se  sancocha,  Ta  que  la  carne  está  dorada  se  le 
echa  el  agua  correspondiente  y  se  tapa  la  «asuela  ponién- 
dola á  fuego  manso.  Antes  de  llevarlo  á  la  mesa  se  cuela 
la  salsa  para  que  quede  limpia. 

212.  Otro.— Se  abre  el  filete  como  libro;  se  pica  y  muele 
un  pedazo  de  carne  de  puerco,  al  que  se  echan  unos  polvos 
de  tomillo  y  pimienta  y  una  ralladura  de  núes  moscada. 
Con  esta  carne  se  rellena  el  filete.  Una  ves  lleno  se  cose; 
se  doran  dos  dientes  de  ajo  en  manteca,  se  sacan  y  se  echa 
en  la  manteca  un  puño  de  cebolla  muy  menuda  á  que  se  aci- 
trón* Ya  que  está  así  se  le  echa  jitomate  crudo  molido  y 
sin  pepitas  y  se  deja  refreír  mucho.  Una  vez  refrito  esto 
se  echa  la  carne  en  el  recaudo  y  el  agua  necesaria.  Se  ta- 
pa la  cazuela,  se  deja  cocer  hasta  que  se  consuma  el  agua  y 
se  sirve. 

213.  Otro. — Se  toma  un  filete  y  se  mecha  con  la  aguja  de 
mechar,  pero  solamente  por  encima;  se  unta  una  cacerola 
con  manteca,  se  pone  encima  la  carne,  se  le  echa  sal  y  pi- 
mienta, se  pone  la  cacerola  en  una  hornilla  que  tenga  sola- 
mente rescoldo  y  encima  se  le  ponen  unas  brasas  á  que  que- 
de como  en  horno.  Antes  de  tapar  la  cazuela  se  rocía  la 
carne  con  un  poco  de  vinagre  y  se  deja  que  cueza  con  su 
propio  vapor. 

214.  Bo$bif.— Se  toma  un  trozo  de  carne  de  vaca  y  se 
corta  al  hilo  en  un  pedazo  del  tamaño  que  se  quiera,  y  se 
maja  bien:  póngase  en  una  sartén  una  cantidad  de  mante- 
quilla y  carne  de  puerco,  se  reboza  la  carne  en  un  poco  de 
harina,  y  bien  caliente  la  mantequilla  se  echa  en  ella  la  car- 


73 

ne;  después  se  roela  oon  un  pooo  de  sal  y  pimienta,  se  vuel- 
ve de  ves  en  cuando  y  se  sirve  caliente. 

215.  Rosbif  inglés* — En  Inglaterra  creerían  echar  á  per- 
der el  rosbif  añadiéndole  otro  aderezo  que  sal  y  pimienta. 
Se  cuece  en  el  asador  oon  gran  fuego,  y  se  quita  del  asador 
cuando  la  cocción  le  ha  hecho  perder  el  color  rojizo  del  in- 
terior. Entonces  se  le  considera  cocido,  aunque  en  reali- 
dad está  medio  crudo.  Se  sirve  al  lado  en  una  salsera  el 
jugo  sin  grasa,  con  algunas  cebolletas  picadas,  un  fuerte 
aderezo  de  sal  y  pimienta,  y  unas  cuantas  gotas  de  vinagre. 

216.  Rosbif  franca*. — En  Francia,  el  lomo,  que  nunca 
forma  un  enorme  asado,  se  echa  en  remojo  en  una  marina- 
da doce  horas  antes  de  ponerlo  en  el  asador.  La  marinada 
se  compone  de  aceite  superior,  bien  aderezado  con  sal,  pi- 
mienta, perejil  picado,  una  hoja  de  laurel  y  cebolletas  pi- 
cadas. El  lomo  se  vuelve  de  cuando  en  cuando  en  la  mari- 
nada, á  fin  de  que  todas  sus  caras  se  impregnen.  Se  deja 
asar  dos  6  tres  horas,  según  el  volumen.  No  se  quita  del 
fuego  hasta  que  la  cocción  este*  bastante  avanzada  para  que 
el  centro  quede  aun  algo  rojizo,  pero  no  sanguinoso.  Se 
sirve  con  la  salsa  misma  que  se  usa  en  el  rosbif  ingles. 

217.  Lomo  de  soca  en  asador. — Se  unta  oon  aceite  el  lo- 
mo después  de  haberle  quitado  el  hueso,  se  espolvorea  con 
sal  fina  y  se  ponen  encima  algunas  hojas  de  laurel  y  rajas 
de  cebolla.  8e  tiene  en  esta  disposición  dos  6  tres  dias,  se- 
gún la  estación;  se  atraviesa  con  el  asador  por  lo  mas  grue- 
so del  lomo,  se  le  envuelve  en  un  papel  gordo  bien  empa- 
pado en  manteca  y  se  pone  á  asar  á  fuego  fuerte.  La  cos- 
tumbre es  servir  aparte  una  salsa. 

218.  Lomo  de  vaea  mechad»  en  asador. — Quítese  el  pellejo 


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nervioso  y  el  gordo,  prepárese  limpiamente,  cortándole  la 
punta,  méchese  con  tocino  por  encima  en  los  dos  extremos, 
y  se  deja  el  medio  sin  mechar,  póngase  en  adobo  algunos 
días  con  aceite,  cebollas,  perejil,  zumo  de  limón  y  canela; 
dispóngase  en  forma  de  8  ó  en  redondo,  ó  si  no,  en  forma 
de  herradura,  y  ásese  en  asador  á  buen  fuego  hasta  que  to- 
me buen  color,  y  se  sirve  con  la  salsa  que  convenga. 

219.  Lomo  de  vaca  en  legumbre*.  -Prepárese  como  el  pre- 
cedente y  póngase  á  cocer  en  una  cacerola  con  algunas  za- 
nahorias y  cebollas,  lonjas  de  tocino,  un  ramo  de  perejil, 
vino  blanco,  caldo  del  puchero  y  un  poco  de  sal;  hágase 
hervir  en  buen  fuego,  se  cubre  la  cacerola  con  fuego  por 
encima  y  se  disminuye  el  de  debajo.  Cuando  la  carne  es- 
to cocida,  cuélese  la  salsa,  tómese  una  cantidad  de  asta,  y 
redúzcase  con  un  poco  de  española;  pónganse  en  ella  las  le- 
gumbres cocidas  de  antemano,  tales  como  pepinos,  achico- 
rias, etc.  Este  lomo  puede  también  servirse  con  salsa!- de 
jitomate. 

220.  Lomo  á  la  alemana. — Se  rebana  el  lomo  en  tajadas 
un  poco  gordas,  se  mecha  con  tiras  de  jamón  gordas  tara- 
bien,  y  después  de  echarle  pimienta  molida,  sal  y  harina, 
se  fríen  en  mantequilla  y  se  dejan  cocer  por  espacio  de  un 
cuarto  de  hora  echándole  el  agua  poco  á  poco  hasta  que  que- 
de la  salsita  espesa.     Se  sirve  oon  aceitunas  y  alcaparras. 

221.  Otro. — Se  picotea  el  lomo  por  ambos  lados  mechán- 
dolo con  jamón  y  pimientos;  se  muelen  especias  finas  lavan- 
do antes  el  metate  con  vinagre,  se  unta  el  lomo  con  aceite 
echándole  las  especias  para  que  esté'  un  rato  en  infusión. 
Se  pone  después  en  la  sartén  á  dorar  en  manteca  y  se  le 
echa  el  agua  suficiente  oon  una  cabeza  de  ajos  machacados, 


75 

gajos  de  cebolla  y  la*  especia*  molidas  en  que  estuvo  en  in- 
fusión, unas  hojas  de  laurel  y  se  deja  hasta  que  suelte  el 
agua  quedándole  solo  una  aalsita.  Este  mismo  guisado  sir- 
ve para  la  lengua  de  ternera  6  de  carnero,  agregándole  so- 
lamente chile  ancho. 

222.  Picadillo  át  vaca. — Se  pica  la  carne  muy  menuda, 
y  poniéndola  al  fuego,  se  añade  un  poco  de  sustancia  de 
aves  ú  otra,  se  le  echa  un  poco  de  caldo  y  vino  blanco  para 
humedecerla,  dejándola  al  fuego  hasta  que  este*  en  su  pun- 
to, sirviéndola  después  al  momento. 

223.  Espaldilla  dé  taca. — Derrítase  uu  poco  de  manteca 
y  échese  dentro  la  espaldilla  deshuesada,  dándole  algunas 
vueltas  á  un  fuego  muy  activo,  se.  le  añade  después  un  poco 
de  agua  6  caldo,  como  medio  vaso  pequeño,  sal,  pimienta, 
yerbas  finas  y  unas  gotas  de  aguardiente,  y  cuácase  todo  á 
fuego  lento. 

224  Estofado  de  vaca. — Se  pone  en  un  puchero  la  carne 
picada  en  pedazos  regulares  con  dos  ó  tres  cebollas  y  un 
grano  de  clavo  de  especia,  una  cabeza-  de  ajos  sin  pelar, 
unas  hojas  de  laurel  y  orégano,  un  vaso  de  vino,  perejil  y 
un  pocilio  de  aceite  por  libra  de  carne;  se  rehoga  todo  á  fue- 
go lento  jr  se  menea  á  menudo;  póngase  un  papel  de  estra- 
za en  la  boca  del  puchero  y  una  taza  de  agua  encima. 

225.  Estofado  de  vaco. — Se  pone  en  un*  olla  la  carne,  dos 
cebollas  y  un  poco  dé  especia,  una  cabeza  de  ajos  bien  pe- 
lada, unas  hojas  de  laurel  y  orégano,  un  vaso  do  vino,  sal, 
perejil  y  un  pocilio  de  aceite,  medio  ó  poco  mas  de  aguar- 
diente y  se  deja  cocer  á  fuego  lento,  meneándolo  de  cuando 
en  cuando  y  poniendo  un  papel  de  estraza  en  la  boca  del 
puchero,  y  encima  su  tapadera. 


76 

226.  Estofado  catalán. — Se  parte  la  emrne  en  pedazos  y 
se  pone  á  freír  en  un»  olla  hasta  qne  se  oonrama  el  agua 
que  ella  suelta.  Entonces  se  le  echa  bastante  cebolla  parti- 
da gorda,  se  deja  dorar  y  se  le  echa  jitomate  molido  para 
que  se  dore  también.  Una  ves  hecho  esto  se  le  pone  el  agua 
necesaria  y  un  poco  de  vinagre,  laurel,  tomillo  y  orégano, 
se  tapa  la  olla  con  nna  servilleta  y  un  plato  boca  abajo  y  se 
pone  A  f  negó  muy  mansa  Se  muele  clavo,  canela  y  pimien- 
ta oon  cuatro  6  cinco  almendras  con  todo  y  cascara  y  se  echa 
á  la  carne.  Cuando  falta  poco  á  la  carne  para  estar  cocida, 
se  fríen  en  crudo  bastantes  papas,  se  echa  al  estofado  un  po- 
co Je  vino  de  Jeras  y  nna  cucharada  de  aguardiente  cata- 
lán y  á  poco  rato  las  papas,  y  así  se  deja  casi  sin  lumbre 
para  que  acabe  de  cocer  al  calor  del  rescoldo. 

227.  Estofado  de  pnlpa. — Se  mecha  pulpa  oon  clavos,  pi- 
mienta, ajos  y  jamón  en  rajas;  una  vez  mechada  se  fríe  en 
manteca;  se  mondan  unos  nabos,  se  rebanan  y  fríen  hasta 
que  se  doran  y  se  muelen  con  un  poco  de  pan  frito.  Se  fríe 
en  una  olla  cebolla  y  ajos  partidos  en  gajos,  se  esha  vino, 
vinagre  y  la  sal  correspondiente  y  se  deja  cocer  á  fuego  man- 
so procurando  que  quede  de  un  espeso  regular. 

228.  Estofado  de  bifUk. — Se  toman  bifteks  mas  espesos 
que  los  que  deben  servir  para  cocerse  en  las  parrillas  y  se 
doran  en  manteca  dentro  de  una  cazula,  volteándolos  para 
que  tomen  color  por  ambos  lados.  Se  retiran  de  la  cazuela 
y  se  ocha  en  la  manteca  que  contienen  una  cucharada  de 
harina;  se  menea  activamente  para  que  se  haga  una  reque- 
mada de  buen  color,  y  se  maja  con  buen  caldo,  en  cantidad 
suficiente  para  que  loa  bjfteke,  vueltos  i  poner  en  la  cazue- 
la, queden  completamente  cubiertos.    Guando  la  salsa  em- 


77 

pieoe  á  hervir  te  le  añade  un  ramo  de  yerbea  finas,  une  ce- 
bolla, une  zanahoria  y  medio  nabo,  cortado  todo  en  tajadi. 
tai  muy  delgadas.  Se  adereza  luego  con  aal  y  pimienta  y  ee 
deja  oóoer  paulatinamente  durante  dos  horas  ó  tres.  Media 
hora  antes  de  servir  te  afiade  á  la  salsa  tres  cuoharadas  de 
harina  mezclada  con  pimienta,  y  cuatro  6  cinco  cebolletas 
doradas  separadamente  en  la  manteca.  Queda  muy  delicio- 
so este  estofado,  si  no  se  sobrecarga  muobo  de  especias. 

239.  Otro  fingido  de  jitomate. — Se  fríe  cebolla,  jitomate 
grueso  y  perejil  menudo;  se  fríe  en  manteca  y  aceite,  se  le 
echa  un  poco  de  caldo,  tomillo,  albahaca  y  orégano,  y  cuan- 
do hierre  se  le  agrega  polvo  de  claro  y  pimienta;  cuando  el 
hervor  está  fuerte  se  echa  la  carne  que  puede  ser  de  guisa- 
do ó  asado,  con  un  poco  de  su  propio  caldo  si  lo  tiene.  Asi 
se  guisa  el  estofado  fingido. 

230.  Bttofado  á  la  cubana.  — Se  toman  dos  libras  de  masa 
de  Taca  ó  ternera  bien  lavadas;  pénense  á  asar  en  las  parri- 
llas, y  cuando  se  juzga  está  asado,  se  corta  en  pedazos  del  ta- 
maño de  una  castaña ;  se  prepara  una  cazuela  con  cuatro  onzas 
de  manteca,  piqúense  cuatro  cebolletas  y  seis  ajos;  se  fríen  y 
se  le  añaden  tres  ajos  crudos,  un  poco  de  perejil,  una  rajita 
de  canela,  un  poco  de  azafrán  en  hebra,  dos  clavillos  y  unos 
granos  de  pimienta,  todo  bien  picado  y  machacado,  colo- 
cándolo encima  de  lo  sofrito,  como  asimismo  la  carne  hecha 
pedazos;  déjese  sofreír  como  un  cuarto  de  hora,  y  añádase 
media  botella  de  vino  seco  6  tinto  bueno:  se  tapa  la  cazuela 
con  ana  tapadera  de  hierro,  en  la  que  se  pone  un  poco  de 
fuego  y  trascurrido  un  tiempo  suficiente  para  que  este*  co- 
cido, que  será  como  media  hora,  se  le  añaden  unas  gotas  de 
sumo  de  limón. 


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231.  Estofado  isleño. — Tómese  ni»  libra  del  lomo  de  ter» 
ñera;  te  le  haoen  unas  rajita»  para  meter  dentro  unos  peda- 
cito*  de  jamón;  póngase  al  fuego  en  una  cazuela  oon  cuatro 
onzas  de  manteca;  hágase  sofreír  á  fuego  muy  lento,  procu- 
rando quede  con  tapadera;  óchese  lumbre  encima  en  peque- 
ña cantidad  y  dójese  hasta  que  haya  tomado  un  color  medio 
dorado;  óchese  entonces  un  poco  de  agua,  Tino  generoso  se- 
co como  medio  vaso  pequeño,  una  hoja  ó  dos  de  laurel,  un 
poquito  de  pimienta  en  polvo;  sazónese  de  sal,  y  procúrese 
hierva  poco  á  poco  como  una  ó  dos  horas;  agregúense  dos 
papas  salcochadas  y  desleídas  bien  en  un  poco  de  agua,  se 
deja  un  pequeño  rato,  y  se  sirve.  Es  un  guisado  de  buen 
gusto  y  sustancioso. 

292.  Estofado  bayamlt.Se  toman  de  una  pierna  de  va- 
ca dos  libras,  que  estón  cortadas  en  pedazos  atravesados; 
póngase  á  oocer  en  una  olla  con  la  sal  necesaria,  y  estando 
cocida,  se  saca  y  se  fríe  en  una  cazuela  oon  cuatro  onzas  de 
manteca;  cuando  lo  esto,  se  echa  medio  vaso  de  vino  seco, 
doble  cantidad  de  agua,  tres  ó  cuatro  cebolletas  enteras,  un 
par  de  hojas  de  laurel,  una  rajita  de  canela  y  seis  dientes 
de  ajos;  se  deja,  que  hierva  lo  suficiente,  y  si  quedase  seco, 
se  le  añade  un  poco  de  agua.  Es  plato  de  mucha  sustancia 
y  apetitoso. 

233.  Bopa  vieja  de  vaca. — Se  cortan  unas  cebollas  y  se 
ponen  en  manteca  basta  que  estón  cocidas;  échese  un  polvo 
de  harina  y  revuélvase  todo  hasta  que  tome  color;  échese 
caldo  del  puchero,,  sal  y  pimienta,  y  cuando  esto  ya  casi 
apurada  la  salsa,  se  echan  tajaditas  de  carne,  que  general- 
mente sobran  del  cocido,  rociase  con  un  poquito  de  vinagre, 
apartándolo  luego  que  esto  bien. 


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234.  Otra  ropa  vieja. — Se  pone  una  azuela  con  manteca 
que  se  deja  calentar  mucho,  y  en  ella  te  fríe  ajo  rebanado, 
cebolla  también  rebanada,  jitomate  y  perejil  picados,  yer- 
babuena  y  todo  género  de  especias,  un  poco  de  azafrán  y.vi* 
nagre  de  Castilla.  En  esta  fritura  se  ponen  unos  peohos  de 
yaca  que  la  reconcentra.  Al  mandarte  á  la  mesa  se  le  agrega 
un  poco  de  vina 

235.  Lengua  de  taca  enpapeL — Se  cuece  y  corta  *n  tro- 
zos mas  ó  monos  gruesos,  edbrase  con  manteca  mezclada  con 
laurel  y  tomillo,  miga  de  pan,  pimienta  y  sal,  después;  se 
cubre  con  un  papel  untado  con  manteca  y  se  tuesta  á  fuego 
templado. 

296.  Lengua  de  vaca  al  Qratin. — Se  asa  la  lengua  y  des- 
pués córtese  en  ruedas  delgadas;  en  un  plato  ó  fuente,  en 
que  haya  de  servirse,  se  pone  un  poco  de  caldo,  un  chorrito 
de  vinagre,  pepinillos,  perejil,  una  cebolleta  y  perifollo,  to- 
do bien  picado  y  sazonado  con  sal,  pimienta  y  uu  poco  de 
pan  rallado;  se  van  poniendo  encima  las  tapadas  y  se  echan 
por  encima  los  mismos  condimentos  que  debajo,  cubriéndo- 
lo todo  con  pan  rallado.  Póngase  el  plato  en  un  hornillo  á 
fuego  lento,  y  déjese  cocer  hasta  que  se  pegue  en  el  fondo; 
después  se  sirve,  echándole  un  poco  de  caldo. 

237.  Lengua  en  bonguera. — Méchese  con  tiras  gordas  de 
tocino  sazonado,  una  lengua  bien  limpia  y  cuidadosamente 
raspado  el  pellejo,  póngase  á  cocer  en  una  olla  con  caldo 
del  puchero,  vino  blanco,  zanahoria  y  cebollas.  Cuando 
haya  hervido  algún  tiempo  cúbrase  bien,  disminuyase  el 
fuego  de  debajo  y  póngase  por  encima  y  déjese  hervir  len- 
tamente por  espacio  de  unas  cinco  horas;  cuélese  la  salsa 


80 

cuando  y»  esto  cocida,  mójete  con  española;  sírvase  la  len- 
gua rodeada  de  legumbres  y  regada  con  la  salsa  dicha. 

288.  Lengua  de  vaca  á  lo  marinero. — Después  de  cocida 
la  lengua,  se  la  quita  el  pellejo:  córtese  en  ruedas,  y  se  cue- 
la el  caldo  en  que  haya  cocido,  se  desengrasa  y  se  pone  todo 
en  una  cazuela  con  dos  vasos  de  vino  tinto  ó  blanco;  cebo- 
lletas fritas  en  manteca  con  un  poco  de  harina  y  reducida  la 
salsa  á  su  punto,  se  pone  sobre  pedazos  de  pan  frito,  echán- 
dole la  salsa  encima» 

239.  Lengua. — Se  cuece  la  lengua  y  se  le  quita  el  pelle- 
jo, se  corta  por  enmedio  y  se  abre.  Se  muele  bastante  jito- 
mate, cebollas,  clavo,  canela,  pimienta,  tomillo,  laurel  y  oró- 
gano.  Todo  junto  se  fríe  en  manteca  hasta  que  se  refría. 
Entonóos  se  pone  en  una  cazuela  la  mitad  del  recaudo;  aba- 
jo con  alcaparras,  luego  la  lengua  y  encima  el  otro  recaudo, 
mas  alcaparras,  un  pocilio  de  vino  de  Jeróz  y  un  poco  de 
vinagre  y  se  pone  á  dos  fuegos  á  que  se  haga  como  asada 
Se  adorna  con  aceitunas  y  chiles  encurtidos. 

240.  Lengua  guisada. — Se  muelen  jitomates,  cebolla  y 
una  cabeza  de  ajo  asada,  pimientas,  cominos,  perejil  y  un 
pedazo  de  pan  remojado.  Se  fríe  todo  en  manteca  y  aceite 
agregándole  rebanadas  de  chile  verde.  Ta  que  está  frito  se 
le  echa  un  poco  de  agua  y  vinagre  y  la  lengua  cocida,  pela- 
da y  rebanada  á  que  cueza. 

241.  Otra.—  8e  asan  y  muelen  ajos,  cebollas,  alcaparras 
y  perejil,  se  fríe  todo  en  aceite  y  ya  que  está  se  le  echa  un 
poco  de  agua  caliente;  se  dora  aparte  y  en  manteca  un  poco 
de  harina  y  se  agrega  al  fritó,  haciendo  igual  operación  con 
canela  y  clavo  molidos;  á  esto  se  añade  un  vaso  de  vino 
blanca    En  este  caldo  se  pone  la  lengua  después  de  cocida 


81 

y  cortada  en  rebanada*.  Se  adorna  oon  pan  y  plátanos  fri- 
tos y  rebanadas  do  huevo*  duros. 

242.  Lengua  en  estofado. — Se  echa  la  lengua  en  agua  hir- 
viendo para  quitarle. bien  el  pellejo.  Cuando  está  bien  pe- 
lada se  lava  el  gañote  con  la  misma  agua  caliente.  Una  vea 
lavada  se  pone  en  agua  fría  y  se  vuelve  á  lavar.  *  Limpia  ya 
se  seca  con  un  lienzo,  se  pone  en  el  picador  y  se  bate  redo 
con  una  pala  6  piedra  para  >que  afloje.  Después  se  clavetea 
con  clavo,  canela,  pimienta,  ajos  y  jamón,  y  se  mete  en  una 
olla  á  que  cueza  con  agua,  vinagre,  «al,  orégano,  tomillo  y 
unas  hojas  de  laurel.  Se  pone  á  cocer  de  un  dia  para  otro  á 
fuego  manso,  tapándose  bien  la  olla  para  que  consuma  hasta 
que  quede  con  poco  caldo.  Se  adorna  con  chiles,  aceitunas 
y  alcaparras. 

?43b  Lengua  de  paca  mechada  y  en  salsa. — Se  deja  veinti- 
cuatro horas  en  infusión  de  agua  fría,  mudándole  ésta  bas- 
tantes veces;  en  seguida  se  escalda  en  agua  hirviendo,  ra- 
yándola para  quitarle  el  pellejo;  méchese  con  lonjas  de  to- 
cino, sazonándolo  con  pimienta,  sal  y  perejil  picado,  y  y  se 
deja  cocer  lentamente. unas  cuatro  6  cinco  horas;  después  se 
retira  del  fuego,  abriéndola  por  medio  sin  dividirla,  y  se 
coloca  en  el  plato; -se  quita  la  grasa  al  cocimiento  y  se  em- 
papa en  un  rojo;  déjese  espesar,  y,  también  puede  reempla- 
zarse con  una.salsa  rubia  6  de  jitomates. 
.  244.  Len£ua  de  vaca  en  pepúpQea  ^Limpíese  bien  y  pón- 
gase en  agua  hirviendo  como  .media.,  hora,;  pásese  al  agua 
fría;  cuando,  esté  fría  se  prepara;  tomen** ¡tiritas  de  tocino 
que  se  sazonan  oon  sal,  pimienta,  eepeoias*  perejil,  cebollas 
muy  picadas;  méchese  con  esto  la  lengua,  y  póngase  á,  00- 

UL   OOOmSA   POBLANA. — TQSU 


82 

oer  oon  buen  sazonamíento  y  yerba*  finas  en  una  cacerola 
oon  algunas  lonjas  de  tocino,  otras  de  ternera  y  de  vaca, 
sananerías,  cebollas  y  especias;  mójese  todo  oon  caldo  del 
puchero,  dájese.cocer  la -lengua  á  fuego  muy  lento  durante 
cuatro  horas;  al  tiempo  de  servirla  se  quita  el  pellejo  de  en- 
cima; téngase  caldo  colado  rojo,  en  el  que  se  echarán  pe- 
pinillos en  pedacitos.  Póngase  en  el  platón,  y  riégúese  con 
esta  última  salsa. 

245.  Lengua  á  la  gdttfaieta. — Se  hace  hervir  despacio 
en  uña  cazuela  oon  una  tasa  de  caldo  y  medio  cuartillo  de 
vino  blanco,  una  lengua  cocida,  despojada  de  su  piel  y  cor- 
tada en  lonchas  delgadas.  Se  sacona  moderadamente  con 
sal  y  pimienta.  Cuando  la  salsa  está  suficientemente  redu- 
cida se  retiran  de  la  cazuela  las  lonchas  de  la  lengua  y  se 
colocan  en  un  platón.  Se  aftade  á  la  salsa  un  puñado  de  pe- 
rejil bien  picado,  dos  yemas  de  huevo  desleídas  en  un  poco 
de  caldo  y  unas  cuantas  gotas  de  vinagre.  Se  echa  esta  sal- 
sa sobre  la  lengua  en  los  momentos  de  servir. 

246.  Paladar  de  vaca  en  salpicón.  r-Póngase  en  un  plato 
sal,  vinagre,  una  cuoharada,  y  pimienta*;  •  bátase  todo,  añá- 
danse después  yerbas  finas,  ajo,  perejil,  -  todo  picado,  tres 
cucharadas  de  aceite,  y  se  hacen  cocer  en  este  conjunto  los 
trozos  de  paladar  en  tajadas  delgadas. 

247.  Paladar  de  vaca  d  la  cajera.  — Limpíense  oon  cuidado 
y  cuezanse  en  agua-,  córtense  en  tiras.  Hágase  enrojecer  ce- 
bolla en  manteca;  cuando  esta  esto  medio  frita,  póngase  en 
ella  el  paladar,  humedézcase  oon  caldo,  añádase  un  manojo 
de  perejil,  sal  y  pimienta;  déjese  menguar  la  salsa,  y  sírva- 
se oon  un  poco  de  mostaza. 

También  se  puede  servir  entero,  asado  sobre  la  parrilla; 


83 

para  esto  es  menester  adobarlo  en  aceite  con  sai,  pimienta, 
perejil,  oebolla  y  ajo,  después  pasarlo  por  pan  rallado  y  asar* 
lo;  en  este  caso  se  sirve  sobre  una  salsa  picante  d  sin  ella. 

248.  Paladar  de  buey  en  las  parrillas. — Despnes  de  co- 
cido se  escurre  bien  y  se  deja  enfriar.  Frío  ya,  se  echa  en 
una  salsa  fría  de  aceite,  sal,  pimienta,  un  ajo,  cebolla  muy 
menuda  y  un  puñado  de  perejil  picado.  Se  le  deja  dos  ho- 
ras en  esta  salsa  "para  que  se  impregne  bien,  dándole  vuel- 
tas para  que  coja  mejor  e)4abor.  Luego  se  pone  en  las  pa- 
rrillas como  un  biftek  y  se  sirve  con  salsa  picante.  ' 

249.  Paladar  de  buey  frito. — Se  dividen  en  pedazos  y  lon- 
gitud de  un  dedo,  un  paladar  muy  cocido  y  despellejado. 

t  Se  pone  en  una  salsa  compuesta  de  caldo,  con  igual  canti- 
dad de  vinagre,  sal,  pimienta  y  una  cabeza  de  ajos  bien  pi- 
cados. Se  calienta  esta  salsa  ligeramente  después  de  echar- 
le mantequilla  amasada  con  harina,  de  modo  que  la  mante- 
quilla se  derrita  y  entonces  se  le  echan  los  pedazos,  que  han 
de  permanecer  en  esta  salsa  unas  tees  horas,  pasadas  las 
cuales  se  retiran  y  escurren  bien,  se  embadurnan  de  hari- 
na y  se  echan  en  una  fritura  bien  caliente.  Luego  se  sirven 
acompañados  de  perejil  frito. 
Del  mismo  modo  se  guisa  la  cabeza  de  buey  y  la  cola. 

250.  Callos. — Vientre  de  vaca  d  la  leonesa. — Después  de 
cocido  se  corta  en  trozos  cuadrados  y  pequeños,  se  po- 
nen en  una  cazuela  á  fuego  vivo  ruedas  de  cebollas  con  mían- 
teca  y  una  cucharada  de  aceite,  pimienta,  sal,  perejil,  y  há- 
ganse saltar  Tos  callos,  dándoles  vueltas  hasta  qué  hayan 
tomado  buen  color  testado;  deben  servirse  calientes  con 
zumo  de  agraz  y  -  limón. 

251.  Callos  con  mostaza.  —Cocidos  y  hechos  pedazos  se' 


*4 

sofríen  en  manteca  sin  tal,  juntamente  con  cebolla  picada, 
abundante,  después  de  aaaonarlo  con  tal  y  pimienta.  Se  le 
añade  caldo  para  que  la  salsa  no  esté  muy  espesa.  >  Al  ser-  « 
rirlo  se  les  deslíe  una  cucharada  de  mostaza. 

252.  Cola  de  vaca  rebotada. — Después  de  cocida  en  la  olla 
y  haberte,  enfriado,  te  derrite  manteca  sazonada  con  sal  y 
pimienta,  y  se  empapa  bien  en  .ella  durante  media  hora; 
después  se'  polvorea  con  pan  rallado,  repitiendo  dos  reces 
esto  mismo;  póngate  en  las  parrillas  y  sírvate  con  una  sal- 
sa picante. 

263.  Binan  de  vaca  d  la  cauro. — Córtese  un  riñon  en  ti- 
ritas delgadas,  póngase  al  fuego  conjnanteca,  sal,  pimien- 
ta, perejil,  cebollas  y  un  ajo  picado.  Después  de  cocido, 
añádase  un  poquito  de  vinagre,  un  poco  de  caldo  colado  ó  " 
en  su  defecto  caldo  del  puohero,  y  no  se  dejan  cocer  mas 
para  que  no  te  encallen. 

254.  Hígado  de  vaca  d  la  casera. — Atóchese  el  hígado  al 
través  con  pedazos  gordos  de  tocino  bien  en  sazón,  póngase 
en  la  cacerola  sobre  lonjas  de  tocino  con  despojas  de  terne- 
ra, raíces,  ajo,  laurel,  olavo,  buen  caldo  del  puchero  y  una 
media  botella  de  vino  blanco;  espúmese  el  todo,  cúbrase 
con  otras  lonjas  de  tocino,  tápese  herméticamente  la  cace- 
rola y  póngase  fuego  por  encima  también;  cuídese  que  no 
oueza  á  grandes  borbotones.  •  Después  de  cocido,  cuélese  la 
salta,,  tomando  la  mitad,  haciéndola  disminuir  ligándola  con 
manteca»  y  se  sirve  con  esta  salta. 

255.  Buey  cocido  d  la  gallineta. — Se  pica  muy  menudo 
un  buen,  puñado  de  perejil  y  cebolla,  y  se  sofríe  con  man- 
teca ó  mantequilla  fresca,  procurando  moderar  el  fuego  pa- 
ra que  la  manteca  no  tome  color.  Se  le  añade  una  buena 


85 

cucharada  de  harina;  se  adere»  oon  sal,  pimienta  y  un  po- 
co de  nuez  moscada  rallada;  se  ié  echa  ana  taza  de  caldo  y 
se  deja  hervir  lentamente  durante  anee  diez  minuto*.  Se 
corta  en  lonjas  delgadas  la  carné  del  cocido,  quitándole  la 
parte  grasa,  se  la  deja  hervir  un  momento  dentro  de  la  sal- 
sa y  antes  de  servirla  se  le  echan  dos  yemas  de  huevo  bati- 
das que  deben  menearse  para  que  se  incorporen  bien. 

266.  Buey  día  moda. — El  pedaso  de  buey  preparado 
para  ser  guisado  á  la  moda,  debe  mecharse  con  tocino  y  ade- 
rezarse bien-  y  por  todos  lados  con  sal  y  pimienta.  Dos  ho- 
ras antes  de  cocerlo  se  remoja  oon  vino  blanco.  Al  cabo  de 
una  hora  sé  da  vuelta  á  la  pie»  á  fin  de  que  el  vino  blanco 
la  penetre  por  ambos  lados.  Preparada  así  la  carne,  se  echa 
en  la  olla  oon  un  pedazo  de  carne  de  pié*  de  ternera  sin  hue- 
so, un  ramo  de  yerbas  finas,  bastante  cebolla  picada  y  dos 
clavos  de  especias.  Se  echa  sobre  todo  esto  una  taza  de  cal- 
do y  se  deja  cocer  durante  una  hora  á  fuego  lenta  Pasado 
este  tiempo  se  da  vuelta  á  la  carne,  se  le  agrega  el  resto  de 
vino  blanco  en  que  se  remojó*  la  carne  antes  de  cocerla,  con 
cuatro  ó  seis  zanahorias  cortadas  en  pedazos,  y  se  deja  co- 
cer bien.  La  olla  en  que  se  hace  esta  operación  no  debe  ser 
muy  grande,  para  que  la  carne  quede  siempre  cubierta  con 
el  jugo  en  que  se  cuece. 

Este  manjar  es  tan  bueno  frió  y  aun  mejor  que  caliente. 
Cuando  quiera  comerse  frió  será  bueno  prepararlo  desde  la 
víspera.  Una  vez  preparado  se  coloca  ciroularmente  en  el 
platón,  combinando  en  torno  los  pedazos  de  zanahoria;  lue- 
go se  echa  encima  la  salsa,  qué  no  tarda  en  convertirse  en 
jaletina.  Hecho  así  es  un  manjar  exquisito  y  elegante! 
267.  Encebollado  de  carne.— La  carne  de  vaca,  ú  otra  de 


86 

ternera  <5  carnero*  ie  deja  ente»  6  en  trozo*,  como  te  quie- 
ra. Se  pone  una  olla  ó  cacerola  al  fuego  con  manteca  6  acei- 
te; ouando  está  frito,  se  rehogan  las  carnee;  en  estando  bien 
doradas  se  les  pone  un, poco  de  pimienta  molida,  se  le 
añade  medio  vaso  de  vinagre  y  se  cubre  con  caldo  del  pu- 
chero ó  agua;  ee  le  pone  un  clavo  entero,  un  jitomate, 
una  cabeza  de  ajos  y  una  hoja  de  laurel.  Si  la  carne  es  de 
vaca,  como  mas  dura,  la  cebolla  no  se  le  pone  hasta  que  es- 
té* á  media  cochura;  pero  si  es  de  ternera  6  cordero,  se-  le 
pone  en  seguida  )a  cebolla  en  bastante  porción,  sazonándo- 
lo, y  cuando  está  oocido  se  deslíe  una  poca  de  harina  en  agua 
fria  y  se  le  agrega  para  espesarlo  y  que  .¿é*  algunos  hervores 
hasta  que  se  conozca  que  la  harina  está  disuelta*.  Se  le  suele 
poner  también  papas  mondadas  ó  en  ruedas  gorditas. 

268.  Seto*  de  vaca  6  ternera.  -rSe  ponen  en  agua  tibia  pa- 
ra limpiarlos  de  la  sangre  y  telilla  que  los.  circunda,  déjen- 
se .en  infusión  dos  horas  en  agua  fria,  después,  pónganse  en 
agua  limpia,  y  que  den  un  hervor,  añadiéndoles  un  poco 
de  vinagre*  sal,  pimienta,  una  hoja  de  laurel,  tomillo,  ajos 
.y  perejil;  media  hora  basta  púa  que  se  cuezan. 

259.  8e$os  am  pan  rallado. — Se  mezcla  pan  rallado  con 
pimienta,  .clavo  molido  en  seco  y  sal,  se  pica  perejil  muy 
menudo  y  se  mezcla  con  lo  dioho  antes.  Se  unta  luego  una 
tortera  con  manteca  y  se  le  echa  .un  poco  del  pan  compues- 
to, -y  sobre  él  se  colocan  los  sesos  rebanados  que  han  de  es- 
tar; bien  cocidos,  se  cubren  con  pan  y  encima  de  éste  una 
capa  de  manteca,  un  poco  de,  aceite  y  unas  gotas  de  limón. 
Hecho  esto  se  pone  la  tortera  ¿dos  fuegos  para,  que  se  dore.. 

260l  Otro  de  $eso$  con  /wrina.— Se  quita  el  pellejo  á  k»£ 
sesos  que  se  desbaratan  luego  con  la  mano,  se  revuelven  con 


87 

sal  y  pimienta  delgada,  te  embarra  una  cazuela  con  mante- 
ca y  se  le  echa  la  masa.  Se  pone  la  cazuela  al  calor  del  baho 
de  una  olla  y  no  se  le  mueve  para  nada  hasta  que  se  forma 
una  especie  de  torta.  En  una  cazuela  grande  se  pone  á  do- 
rar harina  hasta  que  se  ponga  colorada  y  se  echa  allí  la  ma- 
sa para  que  acabe  de  cocer. 

261.  Carne»  infurtidas. — Según  los  tantos  de  carne  sea  la 
-que  fuere,  un  tanto  de  chile  ancho,  otro  de  mulato,  que 
se  echa  á  desflemar,  3ra  que  no  pique  se  muele  con  ajo  asa- 
do, yerbas  aromáticas,  especias  finas,  un  poquito  de  culan- 
tro, otro  de  cominos,  un  pedacito  de  ajengibre,  todo  tostado, 
y  unas  raspaduras  de  nuez  moscada;  todo  se  revuelve  y  se 
baja  del  metate  con  vinagre  criollo  y  sin  echarle  nada  de 
agua,  ya  que  está,  se  le  echa  su  sal  y  un  poco  de  vinagre  de 
yema;  se  ponen  á  cocer  las  carnes  de  ternera,  gallina  6  las 
que  se  quieran,  rebanadas  de  jamón,  chorizos  y  chorizónes; 
ya  que  están  cocidos  se  aparta  el  jamón,  se  rebanan  los  cho- 
rizónes, se  enjugan  las  carnes  con  una  servilleta:  se  ponen  á 
freir  dientes  de  ajo  y  ya  fritos  se  dejan  enfriar,  y  en  una 
tortera  se  echa  un  poco  de  chile  molido,  como  se  dijo,  se 
pone  una  capa  de  carne,  otra  de  jamón,  chorizos  y  chorizó- 
nes, aceitunas,  alcaparras  y  aceite  frito  con  ajos,  y  otra  ca- 
pa de  chile,  procurando  queden  bien  mojadas  las  'carnes. 
Asi  se  ponen  las  capas  que  uno  quiere,  pero  esto  debe  ha- 
cerse tres  6  cuatro  dias  antes  de  comerse;  llegando  este  día 
se  saca  de  la  cazuela,  se  pone  en  el  platón  y  se  adorna  con 
zanahorias  en  infusión  de  vinagre,  queso'  rebanado  y  flores 
de  cebolla. 


88 


CARNERO. 

.  262.  Cualidades  higiénicas  de  la  carne  de  carnero. — 1* 
carne  de  carnero  ha  de  escogerse  de  un  oolor  rojo  oscuro  y 
sin  exceso  de  grasa.  La  mejor  estación  para  comer  el  came- 
ro, empieza  en  otoño  y  concluye  en  invierno. 

La  carne  del  carnero  no  es  enteramente  buena  sino  cuan- 
do,  sin  haber  experimentado  ningún  principio  de  alteración» 
se  halla  oreada  suficientemente;  pues~aun  cuando  es  de  bue- 
na cualidad,  es  dura. y  de  difícil  digestión  inmediatamente 
después  ¡de  muerto  el  animal.  Como,  alimento  común,  con- 
serva perfectamente  el  vigor  corporal  sin  favorecer  la  obesi- 
dad. Los  que  están  predispuestos  ¿;  contraer  una  gordura 
molesta,  porque  dedicados,  á  ¡ocupaciones  que  exigen  dis- 
pendio de  fuerza  física,  oomeajuna  gran  porción  de  carne, 
para  cambiar  esta  disposición,  no  tienen  mas  que  renunciar 
durante  cierto  tiempo  jé  toda  otra  especie  de  carne  para  co- 
mer exclusivamente  carnero.  De.  este  modo  se  , conserva- 
ran  vigorosos  sin  engordar. 

269*.  Carnero  guisad#,r>-FxÍA*6  un,  «pooo  de  tocino  en  pe- 
dazos pomo  dados  con-fin  poco  de  cebolla  menuda,  córtese 
en,  pedazos  la  carne,  que  debe  ser  de  pierna,  y  échese  todo 
en  un  puchero  con  sal  y  pimienta;  se  rehoga  á  fuego  man- 
jbo,  y  ^espueajR  añade  agua  tibia;  y  cuando  estuviere  oeoi- 
do  se  echa  perejil,  una  hoja  de  yerbabaena,  un  cogollo  -de 
lechuga,  piñones,  remojados  y  especias,  todo  bien  picado,  y 
cuando  se  sirve,  un  poco  de  agrio  de  limón. 

264.  Otro. — Se"echan  en  una  olla  los  trozos  de  carne  con 
un  poco  de  sal,  laurel,  perejil,  tocino  entre  gordo  y  magro, 


89 

•  * 

frito;  cuando  se  esté  todo*  rehogando;  se  echan  anos  ajo 
machacados  con  pimienta,  desleídos  con  agua,  y  después  un 
poco  de  agua  bien  caliente,  se  fríen  dos  jitomates  y  se  le 
echan;  después  se  añade  caldo,  sal  y  especias;  está  muy* gus- 
toso si  se  le  añade  el  zumo  de  granada. ' 

266.  Quitado  de  carnero  con  granada. — Después  de  parti- 
da la  carne  en  pedacitos,  se  echa  en  la  olla,  y  también  un 
picado  de  tocino  y  cebolla,  sal  y  pimienta;  y  se  pone  á  re- 
hogar á  fuego  lento,  y  cuando "'  esté  algo  mas  que  á  medio 
cocer,,  se  echa  una  salsa  de  avellanas;  se  echa  de  todas  es- 
pecias cuando  estuviere  bien  cocido,  y  el  zumo  de  dos  ó 
tres  granadas  cocidas  y  exprimidas,  que  hace  una  salsa  muy 
buena  y  gustosa. 

266.  Guisado  de  carnero. — Se  mecha  una  pulpa  y  se 
amarra  con  un  hilo.  Se  echa  en  una  olla  con  varias  lonchas 
de  tocino,  zanahorias,  cebollas,  un  ramo  de  yerbas  finas, 
sal  y  pimienta.  Se  baña  con  caldo  desengrasado,  á  qué  se 
cubra  bien  y  se  deja  cocer  á  fuego  vivo.  Guando  es  fuerte 
el  hervor  se  cubre  el  fuego  con  ceniza  y  se  tapa  la  olla  po- 
niendo lumbre  en  la  tapadera  y  se  deja  así  hasta  que  esté 
bien  cocido.  Se  baña  con  el  jugo  para  servirlo. 

367.  Jigote  de  carnero  atado. — Se  elige  un  buen  trozo 
de  anca  de  carnero  algo  magro.  Se  le  despoja  de  su  prime- 
ra piel  y  se  mecha  con  lonjas  de  tocino.  Luego  se  sumerje 
efr  una  marínsvda  compuesta  de  vinagre  y  caldo  desengrasa- 
do, en  cantidades  iguales,  un  buen  sazonamiento  de  sal, 
pimienta,  yerbas  finas  y  cebolletas  picadas  "con  unos  dientes 
de  ajo*.  Se  deja  la  carne  dos  horas  en  esta  salsa,  voltean- 
d ola"  varias  veces  para  que  se  impregne.  Al  sacarla  se  es- 
curre, se  seca,  se  frota  por  todas  partes  con  un  poco  de  acei- 


90 

te  y  se  pone  en  el  asador  delante  de  un  buen  fuego.  Debe 
rociarte  continuamente  con  au  propio  jugo  y  servirlo  con 
el  mismo,  desengrasada 

268.  Solomillos  de  carnero. — Se  mechan  con  tocino  y  ae 
ponen  en  adobo  tres  días,  con  vinagre,  tomillo,  laurel,  un 
poco  de  comino,  perejil  en  rama  y  cebolla  picada.  Guando 
se  van  á  servir  se  cuecen  con  vino  y  asnear  hasta  que  se  re- 
calen bien  y  tomen,  buen  color,-  presentándolos  calientes 
comuna  salsa  lie  aceite*  pimienta,  sal  y  vinagre. 

269.  Otro  —Se,  mecha  oontooinp  y  pone  en  .adobo  tres 
días- con  vinagre,  tomillo*  laurel,  un  poco  de  comino,  pere- 
jil en  rama  y,  cebolla  picada.  Cuando  se  van  á  servir  se  cue- 
cen con  vino  y  azúcar  hasta  que  se  recalen., .bien  y  tomen 
buen  color,  presenciólo*  calientes  con  una  pebre  de  sal, 
aceite,  pimiento  y  ..vinagre. 

270.  Otro.— Se  deshuesan  y  preparan  dos  solomillos»  po- 
niéndolos en  a4#bo  oon  sal,  pimienta,  aceite  y  medio  vaso 
de  vino  tinto;  dos  horas  antes  de  servirse  se,  ponen  en.  una 
cazuela  juntamente  con  su  adobo  y t  desperdicios,  y  se  hará 
que  cueza  hasta  que  tome  color,  humedeciéndolos  con  un 
poco  de  agua;  déjese  cocer  lentamente  hasta  que  ae  sirva, 
se  desengrasa,  la  salsa  y  se  espesa  con  un  poco  de  harina  6 
fécula,  en  1*  que  se  disuelve  un  terrón  de.  azúcar,  y  ae  ba- 
ñan los  solomillos  antee  deservirlos. 

271.  Quitado  de.  carnero.  — Se  parte .  la  pulpa  en  pódanos 
chicos,  se  lavan  y  eehanen  una  olla  con  una  cucharada  de 
manteca,  rebanadas  de  jamón,  dos  ó  tres  jitomates,  picados, 
cuatro  manojo*  de  cebolla  en  gajos,  4os.cabezaade.ajos  ma- 
chacados con  cascara,  orégano,  tomillo  y  hojas  der,  laurel 
Se  fríe  todo  muy  bien  y  luego,  se  le  echa  un  poeo  de  vina- 


01 

gre  mexicano  y  agua.  Se  muele  clavo,  pimienta  y  canela, 
y  se  le  echa,  procurando  que  el  /caldo  quede  espeso.  Al 
servirse  se  le  echa  vino  tinto  y  se  adorna  con  aceitunas  y 
chiles. 

272.  Carnero  guisado. — Se  toma  carne  de  pierna,  córtese 
en  pedazos  pequeños,  y .  se  pone  en  un  puchero  con  sal, 
manteca,  tocino,  ajos  y  perejil  picado;  antes  de  cocer  se  ha- 
ce una  salsa  con  ajo  tostado,  perejil,  piñones  6  almendras, 
y  se  deja  cocer  un  rato. 

273.  Quitado  de  carnero  con  su  eangre.  —Se  pone  agua  en 
una  cazuela  a1  fuego  y  cuando  está  hirviendo  se  echa  la  san- 
gre ya  cocida,  partida  en  rebanadas.  Se  pone  en  una  sar- 
tén manteca  y  aceite,  se  fríen  bien  las  rebanadas  con  bas- 
tante jitomate  y  cebolla  y  un  poco  de  ajo,  ya  que.  están 
bien  fritas  se  echa  en  la  sartén  el  agua  suficiente  con  cla- 
vo, pimienta,  canela  molida,  perejil,  orégano  y  tomillo  en 
poca  cantidad.  Se  pone  al  fuego  hasta  que  quede  espeso  el 
caldo.  Al  servirse  se  le  agregan  aceitunas  y  chiles  en  vi- 
nagre. 

274.  Carnero  verde. — Se  parte  la  carne  en  pedazos,  po- 
niéndolos en  una  olla  con  sal  y  pimienta,  se  pica  tocino  en 
pedacitos,  se  fríen  bien,  y  lo  mismo  la  cebolla  picada  muy 
menuda;  todo  se  echa  en  la  olla,  que  se  pone  á  rehogar  á 
fuego  manso,  cuidando  de  revolverlo  frecuentemente  para 
que  no  se  pegue;  después  de  bien  rehogado  por  espacio  de 
hora  .y  media,  se  echa  agua  de  la  que  tenga  el  puchero,  que 
se  habrá  puesto  antes  sobre  la  olla  del  guisado;  ya  que  este* 
bien  cocido  se  pone  perejil  en  abundancia*  yerbabuena,  co- 
gollo de  lechuga,  todo  bien  picado,,  piñones  remojados  y  pi- 
cados, todas  especias  y  un  poco  de  zumo  de  limón  ó*  naranja. 


92 

275.  Carnero  verde  peruano. — Se  prepara  un  plato  ancho,  y 
cortando  en  pedazos  regulares  una  ó  düs  libias  dé  carnero,  te 
les  echa  un  poco  de  orégano,  pimienta  molida,  sal  y  unas  go- 
tas de  ácido  de  naranja  ó  limón,  dejando  un  cuarto  de  hora 
que  tomé  él  gusto  del  adobo;  en  el  ínterin,  se  fríen  en  una 
cazuela,  en  cuatro  onzas  de  manteca,  un  chile  verde,  unos 
ajos  y  tres  cebollas;  se  echa  la  carne;  se  pone  á  rehogar  con 
fuego  lento,  y  después  de  una  hora  se  le  añade  un  poco  de 
agua  caliente  para  que  no  se  queme,  y  estando  cocida  la 
carne,  se  le  añade,  bien  picado  ya,  un  poco  dé  perejil  y 
yerbabuena;  se  machacan  eñ  el  metate  unas  sMéndras  tos- 
tadas;  se  agrega  un  poco  de  todas  especias;  se*  sazona*  de- 
jando que  cueza  un  rato,  y  resultará  un  exquisito  guisado. 

276.  Solomillo  de  carnero. — Partido  en  pedazos  él  carne- 
ro y  bien  lavado  se  pone  á  freir  con  unos  dientes  dé  ajo  en- 
teros sin  mondar,  así  que  está  á  medio  freir  se  le  echan 
unos  jitomates,  perejil  bien  meuudito,  y  frito  todo  se  echa 
en  una  olla  con  agua  suficiente  para  que  cuezan.  Se  le  echa 
un  poco  de  orégano  de  Castilla  refregado,  pimienta  y  clavo 
molidos,  un  poco  de  vinagre  y  bien  tapada  la  olla  se  deja 
hervir  hasta  que  está  bien  cocido.  Se  fríen  unas  rebanadas 
de  pan  á  que  se  doren  mucho,  se  muelen  y  se  echan  en  la 
olla  para  que  se  espese. 

277.  Solomillo  de  carnero  ton  legumbres. — Tómese  una  es- 
paldilla de  carnero,  y  después  de  quitados  los  huesos,  mé- 
chese con  lonjas  de  tocino  y  póngase  en  el  asador;  luego  que 
esté  asada  se  sirve,  aderezando  el  plato  con  legumbres,1  co- 
mo espinacas,  ataderas,  coliflor,  hejotes,  papas,  etc. 

278.  Solomillo  de  carnero  dio  cono. — Prepárense  con  lim- 
pieza los  solomillos,  f  méchense  con  tiritas  de  tocino;  pon- 


93 

gante  en  adobo,  durante  cuatro  6  cinco  dias,  en  vinagre, 
yerbas  aromáticas,  perejil  en  rama  y  oebolla  cortada^en  pe-. 
dasos;.pocp  antes  de  servirlos  se  cuecen  en  una  media  jale- 
tina  y  se  bañan  de  caldo  de  buen  color;  sírvanse  calientes* 

•  ■  ■  • 

270.  EepaldUia  de  carnero  atada. — Se  la  rompe  el  hueso 
por  encima  con  una  cuchilla,  y  se  cuece  en  un  asador  pre- 
parado con  lonjas  de  tocino;  se  añade  lo  que  haya  de  dea- 
perdieios  de  carne,  zanahorias,  cebolla  y  un  ramillete,  echan- 
dolé  encima  caldo,  y  se  las  sirve  con  su  cocimiento  reduci- 
do, -6  sobre  achicorias  ú  otras  legumbres,  con  la  especie  de 
sustancias  queso  quiera. 

280.  Costillas  de  carnero. — Tómente  dos  costillares  de  car- 
nero de  los  que  se  sacan  los  solomillos  y  lomos;  uno  de  los 
costillares  se  mecha  con  pedaoitos  de  tocino;  y  el  otro  con 
perejil;  póngase  en  el  asador,  sujetándolos  con  pasadores; 
tres  cuartos  de  hora  bastan  para  que  estén  bien  asados;  se 
colocan  en  un  plato  con  los  solomillos  por  fuera,  y  por  en- 
cima una  salsa  clara. 

281.  Otras. — Se  pone  á  freír  cebolla  rebanada,  ajos  ma- 
chacados, jitomate  rebanado,  pimienta,  clavo,  tomillo,  lau- 
reí  y  orégano.  Se  preparan  las  costillas  con  pimienta,  sal  y 
limón,  se  fríen  aparte,  solo  á  que  se  pongan  blancas  de  am- 
bos lados;  se  muele  e]  refrito,  se  pasa  por  una  pichancha  fina 
y  se  echa  la  salsa  donde  se  están  friendo  las  costillas  con  un 
pedazo  de  jamón  y  un  pocilio  de  vino  tinto. 

282.  De  otro  modo. — Se  las  quita- el  espinazo,  dejando  to- 
da la  terne  que  se  pueda;  se  las  golpea  bien  con  la  cuchilla, 
y  se.  pono  en  las  parrillas  para  que.se  asen  poco  á  poco;  se 
las  unta  continuamente  con,  una  pluma  mojada  en  grasa  de 


94 

tocino  y  agrio  de  limón;  y  ti  se  le  añade  un  poco  de  pan  ra- 
llado, es  muy  bueno  para  los  inapetentes. 

283.  Otras  costillas. — Se  ponen  á  cocer  con  cabezas'  de 
ajos,  vinagre,  tomillo,  laurel,  mejorana  y  sal.  Ya  que  es- 
tán cocidas,  se  revuelcan  en  pan  rallado  y  perejil  Se  en- 
vuelven en  papeles,  se  fríen  en  manteca  y  se  sirven. . .  Del 
mismo  modo  se  preparan  las  colas. 

284.  Lonjas  magras  de  carnero  ó  ternera. — Se  cortan  las 
lonjas  al  través,  y  no  al  hilo,  se  .ponen  en  sal  pop  la  tarde, 
y  á  la  mañana  siguiente  se  fríen  con  tocino;  se  ponen  de*» 
pues  en  una  cazuela  y  se  les  echa  azdcar,  vino  blanco,  unas 
hojas  de  laurel  y  una  raja  de  canela,  dejándolas  cocer  un 
rato. 

285.  Despajos  ó  menudos  de  cordero. — En  estos  se  cora- 
prende  la  cabeza,  hígado,  bofes,  pies  y  corazón;  se  quitan 
las  quijadas  y  el  hocico  á  la  cabeza,  se  hacen .  tajadas  los 
menudos,  se  desangran  y  lavan  bien  con  agua  caliente;  des- 
pués se  ponen  en  una  cazuela  y  se  cuecen  con  sal;  un  mo- 
mento antes  de  servirlos  se  escurren,  y  excepto  á  la  cabeza, 
á  lo  demás  sé  le  echa  una  salsa  picante,  6  lo  que  mas  agra- 
de, con  dos  yemas  de  huevo  batidas,  un  poco  de  manteca  y 
zumo  de  limón;  esté  guisado  se  pone  en  un  platón,  y  la  ca- 
beza en  medio. 

286.  Pecho  de  carnero. — Se  prepara  una  cazuela  con  lon- 
jas de  tocino,  sobre  la  cual  se  coloca  la  carne  y  se  cubre  con 
otras  lonjas.  Después  se  echan  tres  cebollas  en  cascos;  lau- 
rel y  perejil,  tomillo,  sal  y  una  taza  de  caldo,  dejándolo  4 
fuego  lento  por  tres  horas,  con  lumbre  también  por  encima. 
Se  puede  servir  de  dos  maneras:  la  una  se  dora  con  mante- 
ca desleída,  se  empana  con  •  miga  de  pan,  se  polvorea  oon 


96 

pimienta  y  sal;  y  se  pone  en  parrilla  para  servirla  con  salsa 
picante;  la  otra  se  le  quita  la  salsa  y  se  presenta  guarneci- 
da de  escarola,  apio  ú  otra  verdura. 

'  287.  Pecho  de  camero  sobre  la  brasa. — Córtese  en  pedazos 
largos,  cuadrados  ú  ovalados;  pónganse  en  una  cacerola  pe- 
dazos de  tocino,  añadiendo  lonjas  de  jamón,  los  pedazos  de 
pecho  por  encima,  cubriéndolos  con  tocino;  además  dos  za- 
nahorias cortadas  en  rodajas,  tres  6  cuatro  cebollas  también 
cortadas,  laurel,  tomillo  y  una  buena  cucharada  de  caldo; 
se  deja  hervir  lentamente  unas  tres  horas  con  fuego  por  en- 
cima y  debajo;  se  escurre,  se  coloca  en  la  fuente  con  espi- 
nacas, acederas  6  achicorias  en  medio. 

288.  Pecho  de  carnero. — Se  pone  en  una  cazuela  prepara- 
da con  lonjas  de  tocino,  cebollas,  zanahorias,  un  ramillete, 
sal  y  pimienta,  y  se  le  echa  caldo.  Guando  está  ya  cocido 
á  fuego  lento,  se  le  quita  él  hueso,  se  polvorea  con  pimien- 
ta y  sal  fina,  se  dora  Con  manteca  desleída,  se  empana  con 
miga  de  pan,  y  se  pone  en  parrillas  para  servirle  con  salsa 
picante. 

También  se  puede  cocer  en  la  olla  para  prepararle  des- 
pués y  servirles  con  toda  clase  de  legumbres,  sustancias, 
ó  aderezos. 

289.  Panza  de  carnero  rellena. — Se  limpia  muy  bien  la 
pan»,  procurando  que  no  quede  muy  grande  el  agujero 
que  se  le  haga.  Se  voltea  la  panza  para  quitarle  toda  la 
porquería.  Se  calienta  agua,  y  cuando  está  ya  caliente  se 
echa  la  panza  y  se  saca  luego,  y  se  raspa  con  nn  cuchillo 
para  quede  limpia.  Después  se  oojen  las  tripas,  se  vol- 
tean después  de  bien  lavadas,  se'  lavan  por  dentro  expri- 
miendo un  limón  en  el  agua;  con  la  cascara  del  limón  se  re- 


friegan  bien,  va  oue  están  bien  lavada»  te  hacen  trencitaa, 
las  gordasjre.  hacen  pedazos  y  te  vnelven  á  lavar ^  ¿después 
se  ponen  á  cocer  todas  juntas  menos  la  panza,.»©  les .  echa 
agua  y  sal,  y  ya  que.  cocieron  se  parten  en  pedazos  chicos, 
se  pica  jitomate  sin  pepitas,  seis  dientes  de.  ajo,  un  manojo 
de  cebolla  y  un  puco.de  perejil.  Todo  esto,  separado  y  pi- 
cado muy  menudo  se  echa  en  una  cazuela  con  manteca. 
Primeramente  se  le  echa  el  ajo,  yantes  que  se  dore,  se  le 
agrega  la  cebolla  y  luego  el  jitomate  y  perejil;  se  deja  re- 
freír mucho;  ya  que  está  se. pone  ol  agua  y  luego  las  tripas, 
unos  pedazos  de  jamón,  chorizos  enteros,  criadillas  rebana- 
das, alcaparras,  aceitunas,  chiles  .en  vinagre,  pasas,  almen- 
dras y  piñones.  Se  muelen  seis  pimientas,  otros  tantos  cla- 
vos, unas  hebras  de  azafrán,  sal,  y  se  pone  á  hervir  hasta 
que  quede  completamente  seco  como  picadillo,  y  se  baja  de 
la  lumbre.  Se  toma  luego  la  pansa,  y  por  el  agujero  que 
se.  le  hizo,  se  rellena  y  se  cose.  Se  pone  á.  la  lumbre  una 
cazuela  con  manteca,  sal  y  a#ua,  y  se  échala  panza;  el  agua 
debe  cubrirla.  Debe  tenerse  cuidado  de  voltearla  para  que 
no  se  queme.  En  otra  cazuela  se  eopan  jitomates  molidos 
ain  pepita,  se  fríen  mucho,  y  se  echan  en  la  cazuela  en  que 
estala  panza.  Se  deja  consumir  mucho;  se  le  echa  clavo, 
canela,  pimienta  y  azafrán,  todo  molido,  tomillo,  perejil 
picado,  y  un  poco  de  vino  de,  Jerez.  Ha.  de  quedar  el  caldillo 
espeso,  y  se  adorna  con  hojas  de  lechuga. 

290.  Menudo  de  carnero,  r— Ya  que  está  cocido  el  menudo, 
se  pica  bastante  jitomate,  cebolla,  y  ajo,  y  todo,  junto  :  se 
fríe  en  manteca.  Aparte  se  fríe  .un.  puño  de  ajos  y  una»  r*-. 
bañadas  de  jamón,  y  se  muele  esto  con  clavo,  canela  y  ¿pi- 
mienta; se  echan  en.  la  cazuela  unas  tiras  de  jamón  y  unos. 


ohorisones;. cuando  está  bien  frito,  a*. echa  el  menudo  he- 
cho pedacitos.  Se  le  agrega  un  poco  de  perejil,  bastante 
tomillo,  un  poco  de  caldo  en  que  se  coció  el  menudo,  al  que 
se  agregan  unaa  manitas  del  mismo  carnero,  bien  cocidas  y 
deshuesadas.  Ya  que  está  espeso  el  caldillo,  se  echan  en  el 
platón  aceitunas  y  aceite,  y  se  adorna  con  chiles  y  alcaparras. 

291.  Otro  taenmio.— Xa  que  está  bien  partido  y  cocido  el 
menudo,- se  pica  y  se  epjha  en  una  cajuela  con  manteca;  se 
pican  dos  jitomatesrtres  manojos  de  cebollas,. partidas  en 
gajos  y  se  fríen.  Luego  se  le  añade  perejil  picado,  un  po- 
co de  harina  y  se  refríe;  se  le  echa  un  poco  de  caldo  del  me- 
nudo, se  muele  clavo,  canela  y  pimienta  oon  unas  hebras 
de  azafrán,  y  se  cuece;  el  caldillo  ha  de  quedar  espesa  Se 
adorna  el  guiso  oon  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

292.  Otro. — Cocido  el  menudo  y  partido  en  pedacitos,  se 
pica  bastante  jitomate  y  oebolla  con  un  poco  de  ajo.  Esto 
se  fríe  en  manteca,  se  le  echan  unas  hojas  de  lechuga  pica- 
da gorda.  Ya  bien  frito  esto,  se  echa  el  menudo  con  un  po- 
co del  caldo  en  que  se  coció  y  unos  garbanzos  bien  ooddos. 
Se  muele  canela,  clavo  y  pimienta..  Ha  de  quedar  el  cal- 
dillo espeso;  al  servirle  se  le  echa  aceite  y  se  adorna  oon 
chiles,  aceitunas  y  alcaparras.' 

298.  Obro  de  carnero. — Se  pica,  un  poco  de  jitomate  y  oré- 
gano fresco,  un  poco  de  eebojla^ieibanada-  y  ajo  muy  me- 
nuda Se  embarra  la  cazuela  de  manteca»  y  en  ella  se  .echa 
un  poco  de  esta  cebolla,  perejil,  rebanadas  de  jamón  y  cho- 
rizos., .  Luego  se  pone  una  capa  de  carne  y  otra  del  recaudo, 
especias  y  ae  pone  á  la  lumbre  hasta  que  se  cueza  la  carne 
con  poca  agua.    Ya  que  se  oonsumió  se  le  echa  aceite  de 

la  coonrnu.  poblaba. — tom. — l  T 


394.  Oíroma$d§emne9».^Qéhi»4lmní0foéñ  seo*»  en 
unaoaatiela,  y  y»  que  estallen  frHeee^'«^aft>íei<  se  arnto 
onos  jitomates,  m  fríe  en  manteo*  uápafio  de  ajé»  molidos 
con  un  poeo  de  perejil,  orégano,  tomillo  f  vmáá  alcaparras. 
Se  echa  manteo*  en  una  aarten  7  eé  fríe  lo*o/ue  se  molió*;  ya 
qoe  aa  frió*  bien,  ae  eolia  en  1*  cazuela  donde  ésttt la  carne,  ie 
le  añade  uno»  pedaeitos- de  jamón  y  un  poeo  de  rinagre. 
8e  le  muele  claro,  cañe)*' y  pimienta,  y  para  llorarlo  á 
la  meta,  ae  le  adorna  con  chiles  en  rMagré)  aceitunas  y  al- 


caparras.   •■■'.•'    • ';,  '••'  '•■•■■ 

295.  Piante] ds  catim*—Mo<krd*  prepararlo. — La  pier- 
na de  oarnero'es'le  parte  de  este  animal  mas-apreciada;  en 
efecto,  es  la  méjer  del  onerpoí  Cuando- se  elijo  es  necesario 
fijarse  en  i*  longitud  del  «sango,  fti&té  es  largo  y  k  pier- 
na  no  tiene  buen  espesor,  en' comparación  de  su  volumen 
total,  pfvrieño  de  nn- carnero  alto  y  por  consiguiente  de 
mediana  oualiéui'  Después  de  dejarlo  orear  nao  6  dos  días 
en  verano  y  ¿es  6  tres<eii  mviernoy  se  le*  golpea  fuertemente 
por  ambos  lados  eonua  palo,  á  fin  de  ablandarlo  y  luego  se 
pone  en  «el -asador.  •  -33  frtágo  ha  de.  ser  muy  viro  al  princi- 
pio, y  si  el  asado*' feo1' jitvw  bien,  es*  necesaria  dar  oon  fre- 
cuencia vueltas  á  la  pierna.  Se  hv  anta  con  manteca  o^- man- 
tequilla fresca  f  sé  «tí*eB^t<kU*  sentidos;  Generalmente 
se-^nmrta  e*  enWfatf'eilfes*^  suprimirse 

«sí  «o  «gusta.  ;  Ouandeotfljmiotisai  tomar  caJor>  se  modera  el 
fnégey  se^ntinÚAJetfmme^tie'l*  eoooion,  hasta  tener  la 
jegoridaá'de  que'jk*  ajeria*  *nr  e?  anterior  mas  qué  algunas 
partearojisasj  y  «que ai  oortar  la  -pierna;  no  esterares*» 
¿por  oxeoso*oV  ooocttm  •  ni  demasiadQ  sanguinosa  por  el  de- 
fecto oontrario.  Como  término  medio  debe  durar  la  eooeion 


99 

hora  y  media.    Se  sirve  al  sacarle' del  Mador.    El  jugo  se 
sirve  aparte  deMOgratüdo. 


296.  Pierna  de  carnero  atada. — Se  dan  con  al  cuchillo  pi- 
quetes por  tados  lados  de  la  pierna  y.  en  loa  agujeros  se  me* 
ten  dientes  de  ajo  mondados  y  nedaátos  de  jamón.  Ya  que 
está  claveteada  se  unta  toda  con .pimienta,  clavo,  canela  y 
sal,  todo  bien  molido,  y  se  pone,  en  una  cazuela;  se  le  echa 
medio  cuartillo  de  vino  blanco  y  media  libra  de  manteca  y 
agua  en  poca  cantidad,  se  tapa  la  cazuela  y  se  pone  á  dos 
fuegos  hasta  que  quede  bien-  dorada. . 

297.  Oirá,  p¡Umade  contra -r-Se  coje  la  pierna  y  se  le 
quita  el  zancarrón,  después  se  coje  yerbabuena,  perejil,  ajos 
rebanados,  pimienta  y  clavos,  molidos,  sal  en  .polvo,  un  po- 
co de  jamón  rebanado  en  buen  grueso,  se  clavetea  la  pier- 
na como  estofado  con  todo  esto,  y  para  que  quede,  mas  bien 
hecho,  so  abre  de  tramo  en  tramo  con  la  punta  de  un  cuchi. 
Ha  Se  pone  en  una  cazuela  que  no  sea  extendida  y  se  le 
echa  la  cantidad  de  agua  que  sea  necesaria,  cuatro  partes  de 
vinagre  y  medio  cuartillo  de  vino  oarlpn,  un  pooo  de  pimien- 
ta y  clavos  entecos,. se  pone  á  dos .  fuegos  hasta  que  ■  quede 
como  asada.  . 

298.  Pierna  de  carnero. — Sé  pone  en  tina  cazuela  chica 
cebolla  picada  y  perejil  también  picado,  unos  pedazos  dé  ja- 
món, aceité,  el  zumo  dé  dos  limones,  especias  molidas  en 
polvo  y  un  pooo  de  saL  Todo  esto  sé' revuelve  bien,  se  ha- 
cen con  él  cuchillo  unos  agujeros' en  la  pierná'y  sé  rellenan 
con  lo  dicha  Sé  echa  manteca  en  otra  ouzuela  6  sartén 
grande,  'alli  sefríe  la  pierna.  Se  muele  bastante  jitomate 
y  se  agrega  á  la  carne;  cuando  está  bien  frito,  sé  le  echa  agua, 


100 

«Uto,  piojenta  y  caneca  ea.  pojvo,.  Se  *4p*na.eJ  platón  con 
chile»  en  vinagre,  aceitunas,  aleapai^.  y  alcaparrones. 

299.  Pierna  de  carnero  mechada. — Se  quita  el  hueso  de  la 
pierna  cuidando  de  no  destrocaría.  Hecho  esto  se  clavetea 
con  ajos  pelados,  clavo,  canela' y  pimienta;  se  pone- en  una 
sartén  con  manteca,  agua  ¿unciente  y¿la  sal  nécesAra,  yer- 
bas de  olor,  especias  'finas  molidas  y  un 'poco  de  vinagre. 
Póngase  á  cocer  á  dos  fuegos^  Ha  de  Quedar  seco  el  caldi- 
llo. Lo  mismo  puede  hacerse  con  lomo  de  puerco  6  pulpa 
dé  ternera.' 

300.  Pierna  de  carnero  dláingUea. — Después  de  haberla 
cocido  en  nn  liento  muy  tupido,  se  le  inet*  en  una  caldera 
llena  de  agua  cote  mn*horia*,'naboa  y  sal-  y '  alas  dos  horas 
de  hervor  se  saca  del  liento  en  que  está,  y  se  aderen  con 
legumbres  al  rededor  para  servirla,  acompañada  con  una 
salsa  y  manteca  desleída, 

.  901.  Pierna  de  carnero  eoñpapae. — Be  quita  el  hueso  de 
hacia  la  rabadilla  y  se  redobla  la  carne;  se  corta  muy  oorto 
el  hueso  de  la  pierna,  se  pene  la  carne  á  freír  en  manteca; 
se  moja  con  nn  poco  de  caldo,  se  saxona,  añadiendo  trama* 
nojo  de  yerbas,  poniádolo  á  cocer  á  fuego  lento;  se  sirve 
con  papas;  también  puede  servirse  con  ejotes  ó  las  legum- 
bres que  se  crean  á  propósito. 

302.  Pierna  de  carnero  en  «ador.— tara  que  este*  buena 
es  necesario  que  esté  un  dia  oreándose,  .sé  golpea  .después 
un  poco  para  que  salga  mas  tierna,  y  se  pone  en,  adobo 
un  dia  con  aceite,  pünieqtot,  cebolla  y  perejil;  se  le  pone 
un  diente  de  ajo  entero  en  varias  partes  de  la  carne,  y  pón- 
gase en.  el  asador  á  un  fuego  muy  vivo,  de.  .manera  que  se 
tueste  pronto,  y  dncante  la  cocción  se  le  dará  vueltas  i  me- 


101 

nudo,  rodándola  oon  su  gnu»  y  el  adobo;  debo  estar  en  el 
fuego  hora  y  media  por  lo  menos. 

903.  Pierna  de  carnero  cocida, — Se  quita  el  hueso  y  se  po- 
ne en  ana  camela  &  f  negó  lento  oon  manteca  para  qne  tome 
color  por  ambos  lados,  rodándola  oon  un  poco  de  agua;  se 
añaden  dos  dientes  de  ajo,  cuatro  cebollas  -enteras  y  dos  za- 
nahorias,  y  qne  óueaan  lentamente  seis1  horas;  sazónete  con 
sal  sin  especias,  después  se  desengrasa  el  caldo  y  se  traba 
con  Un  poco  de  harina  ó  fécula;  extiéndase  por  la  superficie 
con  una  plumita,  y  sírvase  sola,  poniendo  debajo  del  platón 
escarola  cruda. 

304  Pierna  de  camero  estofada. — Despójese  de  los  hue- 
sos y  méohese  oon  tocino  sazonado  con'  especias  y  sal,  de 
modo  que  las  lonjas  no  salgan  fuera  de  lá  carne,  y  átese  con 
un  mecate,  dándole  un  golpe  en  la  coyuntura  y  cortando  el 
hueso  para  que  ocupe  poco*  espacio;  póngase  en  una  cazuela 
con  seis  cebollas,  tres  zanahorias,  un  manojo  de  perejil,  yer, 
bas  aromáticas,  sal,  especias,  un  poco  de  tocino  y  dos  vasos 
devino  ó  agua;  luego  que  principie  á  hervir  lentamente- 
póngase  fuego  encima  de  la  cobertera,  y  cuando  ha  cocido 
lo  suficiente,  se  sirve  con  su  caldo  desengrasado. 

305.  Picadillo  de  carnero  con  huevo*. — Se  pica  muy  menu- 
damente la  carne  y  puesta  en  el  plato,  se*  sirve  con  pan  fri- 
to al  rededor  y  huevos  estrellados  sobre  una  salsa  de  jitoma- 
te ú  otra. 

306.  Picadillo  de  carnero  aeado.  —Quitadas  todas  las  mem- 
branas y  tendones,  se  pica  muy  bien  la  carne  con  papas  oo- 
cidas  ó  castañas  asadas,  yerbas  finas  pasadas  por  manteca, 
con  una  cucharada  de  harina,  que  sé  deja  tostar; 'se  le  echa 
oaldo  y  se  anadé  el  picaoUHo,    ÓuanaV  está  ya  en  sazón  se 


103 

sirve  con  rebanadas  de  pan  .frito  al  rededor.  £i  necesario 
que  la  talaa  en  que  se  ponga  el  picadillo  sea  espesa,  ye»  vas 
de  pao  frito,,  se  puedan  poner/huevos  estrellados. 

907.  Ticadiüo  de  carnero.  -Para  aprovechar-  la  carne  que 
sobra  de  un  dja  para,  otro,  se  echa  en  la  sartén:  con  .un  poco 
de  grasa,  yerbas,  fifias  pipadas,  un  vaso  de  vino  blanco,,  sal 
y  pimienta*  se  Je.aQade.  un  poco  de  caldo,  y  solo  se  deja  ca- 
lentar sin,  hervir.  : 

308.  IU4laTmguÍBCulá*.-r-8e  ponen  á  hervir;  va  que  birvie- 
rondín  rsftOf  *»  tara  el  agua  y, se  les  echa  otra  caliente.  Se 
dejan  cocer,  y  ya  que  están  se  rebanan,  se  fríen  unas  ruecas 
de  pan  y  se  miieHm  con  trae,  clavos,  tres,  pimientas  y  un  po- 
co de  canela. ;  Se.frie  todo  en  manteca  y  se  le  echa  un  poco 
de  agua  y  los, ríñones;  sal  j  .vinagre  y  se.  deja  sazonar. 

809.  Otro*,— &e  cuecen  ccuno  loe  anteriores  y  se  rebanan. 
Se  asan  unos  jitomates,,  se  muelen  con  clavo,  canela  y  pi- 
mienta, se.  fríe  todo  en  manteca  y  aceite,  se  añade  un  poco 
de  vinagre,  luego  Jos  ríñones  en  el  recaudo,  y  se  dejan  sazo- 
nar procurando  que  la  salsa  quede  espesa.  Se  adornan  con 
pan  frito. 

310.  Riñonet  de  carnero  salteado*. — Seles  quita  el  pe- 
llejo exterior,  se  abren .  á  !q  largo,  y.  se  sofríen  teniéndolos 
separados  uno  de  otro  poniéndoles  sal  y  pimienta.  Se  les 
dan  vueltas  hasta  que  caten  bien  cocidos.  Se  fríen  separa- 
damente cortezones  de  pan  del  tamaño  de  los  ríñones  y  en 
igual  cantidad,  v  se  eojocan  en  un  platón,  cada  parte  de  ri- 
ñon con  un.  cofteaon  frito.  Se  les  echa  encima  salsa  espa- 
ñola,  ó"  á  falta  de  ella  una  requemada  de  .manteca,  mojada 
con  .media  copa  de  vino  blanco.  Al  momento  de  servirse  se 
les  añade  sumo  de  limón  6  i}nas  cuantas  gotas  de  vinagre. 


103 

311.  Biñonu  de  carnero, — Se  abren  por  medio  y  je  sazo- 
nan con  «al,  pimienta  y  atravesándolo*  con  ana  aguja  de 
lardear,  se  ponen  en  las  parrillas;  cuando  están  asados  se  po- 
nen en  una  caanela  con  manteca,  y  se  hace  una  salsa  de  ajo 
y  perejil  machacado,  desatándola  con  .un  poco  de  vinagre; 
también  pueden  cocerse  con  un  vaso  de  vino  fuerte. 

313.  ■  Btíkmm  de  carnero  osado. — Después  de  bien  limpios 
y  partidos,  sin  separarlos  enteramente  se  ponen  en  un  asa- 
dor pequeño  para  que  se  mantengan:  abiertos,  se  echa  des- 
pués un  poco  de  manteca  en  el  fondo  de  una  camela,  y.  den- 
tro los  rutones;  se  coloca  todo  á  un  fuego  vivo;  cuando  es- 
tán á  punto  se  ponen  en  su  interior,  una.  albondiguilla  de 
manteca  desleída,  .con  yerbas  finas  ó  manteca  de  anchoas,  y 
un  poco  de  sumo,  da  limón.   . 

313.  Sangre  &  ¿omero.:— Se  poneá  hervir  agua  en  una 
casuela,  y  cuando  hierva  se  le  eoha  la  sangre  cocida  y  reba. 
nada.  Se  pone  en  una  sartén  aceite  y  manteca,  se  fríen  bien 
las  rebanadas  de  sangre.  Aparte  se  pica  bastante  jitomate 
y.  cebolla  con  un  poco  de  ajo  y  se  fríe;  ya  bien  frito  se  le 
echa  la  sangre  que  se  trió  aparte,  se  le  añade  agua  en  poca 
cantidad,  clavo,  pimienta,  canela  molida,  perejil,  orégano, 
tomillo  y  se  cuece.  Debe  quedar  con  poco  caldillo.  Se 
adorna  con  ohiles  y.  aceitunas . 

314.  Sangre  de  camero*  ^-Se  pone  una  casuela  con  agua  y 
ya  que  hierva  á  borbotones  se  echa  la  saugre  con  poca  sal  y 
se  deja  cocer  sin  que  se  desbarate;  después  se  saca  y  se  par- 
te en  rebanadas  delgadas,  se  echa  manteca  y  aceite  en  la  sar- 
ten  y  se  fríen  las  rebanadas,  ó  mas  bien  se  sancochan,  pues 
dejándolas  freír  se  endurecen.  Se  pica  bastante  jitomate, 
cebolla  y  un  poco  de  ajo  y  se  echa  á  freir  en  la  misma  sar- 


104 

ten  en  que  se  frió*  la  sangre. '  Se  añade  agua  y  en  seguida 
se  echa  la  sangre;  se  muele  clavo,  canela  y  pimienta,  y  se 
echa  un'  poco  de  perejil  picado,  orégano  y  tomillo.  El  cal- 
dillo ba  dé  quedar  sumamente  espeso.  Se  le  echa  un  poco 
de  aceite  y  se  adorna  con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

315.  ¡kmgr*  de  carnero. — Se  cortan  á  lo  largo- cebollas  en 
abundancia,  echándoles  sal  y  pimienta,  cuando  se  degüelle 
el  carnero  se  menea  la  sangre  y  se  junta  con  la  cebolla,  se 
pone  todo  en  una  cazuela  de  asar  y  se  mete  en  el  horno; 
cuando  esté  bien  tostado  se  saca  y  puede  comerse  caliente 
6  frío;  si-  no  se  quiere  llevar  al  horno,  se  asa  en  casa,  ponien- 
do la  cazuela  á  lumbre  fuerte,  con  brasas  en  la  tapadera. 
También  puede  hacerse  la  sangre  del  modo  siguiente:  se  po- 
ne aceite- á  hervir  en  una  sartén,  y  recien  sacada  la  sangre, 
se  echa  á  cucharadas;  sale  como  buñuelos,  y  se  sirve  con  pi- 
mienta y  sal. 

310.  Mollejas  de  cordero. — Después  de  limpias  se  ponen 
en  agua  fria  por  algún  tiempo,  se  echan  en  una  cazuela  con 
una  taza  de  caldo,  un  poco  de  pimienta,  sal,  cebollas  peque- 
ñas y  nuez  moscada;  se  menean  bien  con  una  proporcionada 
cantidad  de  manteca  enharinada  y  se  deja  por  media  hora  4 
fuego  lento:  se  baten  después  tres  huevos,  perejil  picado  y 
nuez  moscada;  después  se  añade  zumo  de  limón  y  algunos 
chícharos.         '  "  '   :? 

317.  Bofes  púdonos. — Se  lavan  bien  y  se  pone  á  cocer  los 
bofes  en  un  puchero,  teniendo  el  garguero  fueTa  de  la  olla 
para  que  espume.  Cocidos  que  sean,  se  parten  á  pedacitos 
y  se  preparan  del  modo  siguiente':' se  machacan  cuatro  ajos 
con  un  poco  de  pimienta,  se  desata  en  vinagre  y  se  rocía  so- 


1Ó5 

brc  los  bofes  aceite  erado  y  sal  molida,  y  se  le  da  vueltas  á 
fuego  lento. 

318.  Hígado  de  carnero. — Cuándo  está  la  manteca  hir» 
Tiendo  se  echa  el  hígado  partido  en  tajadas  delgadas  y  lar* 
gas,  después  se  hace  el  mismo  guiso  que  á  los  bofes,  según 
hemos  prescrito. 

319.  Seso*  de  carnero, — Se  preparan  como*  los  de  yaca  6 
ternera;  lo  general  es  cocerlos  y  rebosarlos  con  harina;  des- 
pués pueden  guisarse  con  cualquiera  salsa. 

390.  Pepitoria  de  hígados  y  bofa  de  cordero  y  cabrito. — Se 
limpian  y  cuecen  con  sal  y  agua,  después  se  pican  y  fríen  en 
aceite  ó  manteca  con  cebolla,  cuando  estuvieren  fritos  soles 
hace  una  salsa  de  avellanas,  ajó,  miga  dé  pan  tostada  y  es- 
pecias,  se  desata  todo  con  un  poco  de  agua  tibia,  añadiendo 
un  huero  duro  picado;revuélvase  todo  y  déjese  cocer  un  rato. 

331.  Chanfaina. — Se  cortan  pedazos  del  hígado,  bofes  y 
sangre  cocida  de  carnero,  se  rehogan  en  manteca,  echando 
cebollas,  ajos,  especias,  perejil  picado  y'  chile;  después'  de 
bien  rehogado  todo,  se  aftade  agua  y  se  pone  á  cocer;  se  fríe 
harina,  que  se  disuelve  con  agua  cuando  está  bien  frita,  y 
se  aftade  á  la  chanfaina  para  que  espese  el  caldo;  si  se  quie- 
re puede  echarse  un  batido  de  huevos.'*' 

323.'  Asadura  üamadd  gandinga.--89  pica;  'jitomate,'  ajo 
y  cebolhi  muy  menudita,  se  fríe  en  manteca  y  sé  echar  poca 
agua;  piqúese  asadura  cocida  y  déjese  secar;' cuando  esté,  se 
muelen  tres  ó  cuatro  chiles'  arichos  remojados,  urior  comi- 
nos y  se  echa  agua  con  la  sal  oorreÉrpbtídiente.  'ftéjésé'á 
dos  fuegos  hasta  que  sé  seque.  Adórtíesé  con  'plá*tárió:frito. 

3S23.  Otra  d  la  mexicana  — Se  pone  á  cocerla  assJdura  con 
laurel,  tomillo  y  orégano;  se  friéájof,  cebolla]  y  Jitomate,  des- 


106 

pues  de  picarlo  todo,  j  tinto  oon  anas  rajas  de  chilohote,  á 
que  10  refría  bien.  En  una  olla  aparte,  te  oueoen  unos  cho- 
rizos oon  un  pedazo  de  jamón;  ya  que  está  cocido  el  jamón 
te  parte  en  rajas^  y  ae  sancochan  en  el  recaudo  y,  con  el  cal- 
do en  que.ee  oooioV  .  8e  parte  luego  en  pedazos  la  asadura, 
se  muele  chile  ancho  remojado,  con  ajos  crudos,  clavo,  ca- 
nela y  pimienta,  y  se  echa  todo  en  el  recaudo,  menos  los 
choróos  que  se  (cien  aparte. y  se  colocan  en  el  platón,  en- 
cima del  guiso. 

324.  Atadura  de  carnero  en  crudo. — Se  pica  la  asadura  en 
crudo.  Se  rebanan  vinos  manojos  de-  cebolla, .  un  jitomate 
y  perejil;  se  cpjen  unas  rebanadas  de  jamón,  -y  todo  junto 
se  echa  en  la  cazuela  con  bastante  manteca.  Ya  que  está 
fritase  Je  echa.  ague,.k.-clavo  molido,  canela,  pimienta  y  un 
poco  de  vino  Jerez.  Se  adorna  con.  chiles,  alcaparras  y  acei- 
tunas.    . 

326.  Otra  asadura  de  carnero. — Se  rebana  el  bofe  en  re- 
banadas del  grueso  de  un  dedo,  se  ponen  en  una  sartén  oon 
bastante  manteca  y.  un  poco.de  sal.  Se  pica  jitomate. en 
una  cantidad  equivalente  á  una  tercera  parte  de  la  asadura, 
y  otra  parte  igual  de  oebolla,  y  todo  junto  se  cuece  á  fuego 
lento  sin  agua,  hasta, que  se  fría.  Entonces  se  le  echa  agua 
caliente  en  cantidad  proporcionada,  un  polvo  de  pimienta 
y  aceite  de  comer*..  ,  Be  pone  á  cocer  y  se  deja  consumir  el 
agua:  el  caldillo  debe  .quedar  espeso. 

336,  Oír  a. -riSe  parte,  la  asedara,  en  pedazos  grandes  y  se 
pone,á:cocer  en  unaoUa;  una  vez  cocida.se  parte  en  pedazos, 
se  pica,  jitomate,  cebolla  y  ajo,  y  se  fríe  oon.  mucha  mante- 
ca; ya  que  está,  frito  se  le  echa  la  asadura;  se  muele  cjavo, 
pimienta,  perejil,  orégano  y  tomillo;  se  pica  todo  bien,  se 


107 

pone  al  fuego  á  que  quede  muy  espeso.  Se  «dorna  con  re* 
bañadas  de  jamón  coció)®,  ediles,  y  aceitunas. 

327.  Otra. — Después  de  hervida  se  corta  en.tajaditas,  y 
se  rehogan  oon  manteca  y. sal,  ouidando  de  espumarla  mu- 
cho; luego  se  fríen  oon  jitomate,  y  anteado  servirlas  se  gui- 
san oon  agua  tibia  ajo  y  especias. ,. 

*  328.  Mondongo. — Después  de  bien  limpio  y  lavado, oon 
dos  6  tres  aguas,-  se  escurre  y  se  deja  en  adobo,  compuesto 
de  vinagre,  limón,  sal,  un  ramo  de  laurel,  durante,  un  par  de 
horas,  y  luegp  se  saca  y  escurre.  Córtese  en  pedazos  y  pón- 
gase á  cocer  con  mal,  chorno  cortado  en  ruedas,  tomillo  y 
perejil  picacho;  cuando  est¿  casi  cocido  se  hace  una  salsa  oon 
miga  de  .pan  tostado,  ajos,  tocino,  especias  y  chile;  se  aca- 
ban de  cocer  en  olla,  revolviéndolos  bien  y  se  sirven. 

929.  Mondongo  á  la  italiana, — Después  de  preparado  como 
queda  dicho,  ,se  cuece  oon  cebollas,  perejil,  zanahoria,  lau- 
rel, albahaen,  clavos  de  especia,  sal  y  chile,  con  cantidad  su* 
¿cíente  de  agua.  Se  taca  y. pone  á  escurrir,  y  se  corta  en 
trozos  gruesos,  como  de  cuatro  dedos  que  deberán  rebozar- 
se con  manteca  derretida9  y  mezclada  pon  perejil,  cebolletas, 
un  poco  de  ajo.  muy  picado,  sal  y  pimienta,  y  se.  sirven  con 
jiña  salsa  picante. 

330,  Mondongo  d  lo  campesino. — Lo  primero  que  se  hace 
es  lavar  el  mondongo  en  Agua  caliente;  después  de  bien  es- 
currido »*  1*7*  otra  ve»,  .con  buen  vinagre  6  .xumo  de  limón. 
Se  corteen  pedazos  pequeños  y.  se.  echa  en  una  olla  con  agua 
y  sal,  una  nata  geijarnerA  sin  huesos,  jamo?  cortado  en  pe- 
dazos, un  buen  ohorizo,  algunos  garbanzos  de  Castilla»  el 
zumo  de  medio  limen,  dos  cabezas  de  ajos  enteros  y  chile; 
luego  se  muele.un  poco.  o>  pan.  remojado  con  azafrán,  tres 


ajos,  unos  cominos  y  culantro  don  tmtyoeo  del  mismo  caldo 
del  mondongo;  se'eoha  en  el  guisado  y  te  deja  espesar  nn 
poco.     Se  sirve  siempre  muy  caliente. 

Si  te  echan  tripas,  debe  volverse  lo  de  dentro  afuera 
cuando  se  lava,  todo  del  modo  que  hemos  dioha 

231.  Mondongo. — Bien  limpió  él  menudo  con  agua  de  cal 
y  enjuagado  con  limones  esprimidos  para  que  quedé  mas 
blanco  y  se  disipe  el  hedor,  se  pone  á  cocer  agregándole  pa- 
tas de  puerco  y  tripas  también  muy  limpias.  Las  patas  se 
cuecen  aparte.  También  se  cuecen  garbanzos  en  cantidad 
regular  y  se  pelan.  Se  fríe  testante  cebolla1  y  ajo  en  buena 
cantidad  de  manteca  con  chiles'  verdes;  se  muele  un  pedáso 
de  chile  ancho  oon  unos  oomfábsj'  jitomates 'asados  y  unos 
pocos  de  garbanzo*  cocidos,'  Táchese  én  lo  frito  las  patas  de 
puerco  con  su  caldo,  el  menudo  y  tripas  sin  agua¿  después 
de  haberlo  cortado  én  pedamos  para  ponerlos  á  cocer.  Se  le 
agrega  orégano  de  Castilla,  los  garbearos  enteros,  chorixos, 
jamón,  longaniza' y"sal,  v  sé  foja 'ratonar  toíáo  jutfto. 

832.  Otro  mondólo.  --Despu  es  °cfe  bien  lavaba  ge  deja 
én  agua  de  limón  un  buéh  rsto  y  se  ¡¿ñ^ulaga;**  corta  en  pe- 
(laxos  y  se  pone  á  cocer  con  garbanzos  y  tm  trozo  de  jamón, 
una  cabesa  de  ajos,  un  pedazo  de  oebolla  en  cuartos,  espé* 
ctás  enteras  y  tm  poco1  de* vinagre.  Al  día  simiente  le  ha- 
ce un  refrito  dé  todo  el  recaudó  otfóeatéouUi'  finas  molidas 
con  un  chile  ancho  remojado7;  yattf  se*  vacia  *eT  mondongo 
con  un  paco  de  caldo,  poniéndole  Jíbr  eáctmajámon,  'oréga- 
no én  polvo,  vinagre,  aceitunas,  alcaparras'^'  bailes  encur- 
tidos. • %    "  ',"--     •    '''    j:';  r    ■'"   "•■ 

¿33.  Mánot  di  carnero  d  la  e^^^lHJspüés  de  haberlas 
deshuesado,  se  cuecen  y  sazonan  oonveníéntémétite; cuando 


m 

están  cocidas  se  anadean  feti^o.d*  hueyoe,  perejil  picado 
muy  menudo,  un  poco  de  harina  y  aumo  de  limón. 

334.  Mano*  de  carnero  con  salsa  italiana  ti  oirá. — Hecha 
la  salsa  que  ae  quiera,  se  ponen  en  ella  laa  manos  de  carne, 
ro- aderezadas  y  cocidaasegnit se  ha  dicho... 

336.  Manos  de  carnero  con  yerbas  finas. -*-&•  onecen  en 
agua  sola,  se  las  quitan  los  huesos  grandes,  poniéndolas  en 
seguida  en  una  cacerola  orm  manteca,  yerbea  finas  picadas, 
sal  y  pimienta;  se  espesa  el  caldo,  retirando  las  manoa  para 
que  se  enfrien :  se  meten  en  la  salsa,  y  en  seguida  ae  envuel- 
Ten  en  miga  de  pan,  poniéndolas  á  asar  á  fuego  lento,  y  se 
sirven  con  una  salsa  picante. 

336.  Colas  de  carnero.-^Sa  ponen  laa  colas  de  carnero  en 
una  cazuela  preparada  con  lonjas  de  tocino,  sanábanse,  ce- 
bollas, un  ramillete  de  yerbas,  sal,  pimienta,  un  vaso  de  vi- 
no blanoo  y  otro  tanto  de  caldo,  y  se  dejarán  cocer  á  fue- 
go lento;  cuando  están  á  punto  se  retiran  y  se  (as  deja  es- 
currir para  servirlas  con  lechugas;  escarola,  papas  6  cual- 
quier especie  de  sustanoia.  ,v     • 

337.  Colas  de  carnm>)Wi<u.-— Preparadas  como  va  dicho, 
se  cortan  en  pedasos  mas  ó  menee  gruesos,  se  pasan  por 
manteca,  y  segunda  ves  por  huevos,  se  hacen  freír  para  ro- 
dearlas de  perejil  frito,  y  en  lugar  de  la  miga  de  pan,  se 
puede  meter  en  pasta  de  freír. 

.  333.  (Jolas  de  carnero  en  parrillas.-— Oo^iea.  como  ya  va 
dicho,  se  meten  en  aceite,  ydespue»  de  haberlas  empanado 
se  ponen  en  la  perrilla,  á  fuego  mansov   ••  : ;  . 

839.  Cofas  de  camero.— Se  prepan  una<aasne)a  con  hojas 
de  laurel,  tocino,  cebollas,  pecejU, sal,  puntéate,  un  vasod> 
vino  blanco  y  otro  tanto  de  caldo,  se  echadla  cola  de  carne- 


110 

ro,  dejándola  eocer  á  fuego  lento,  y  cuando  mM  á  panto  ie 
retira  ywk  deja' escurrir  'pata-  servirla  con  lechugas  y  'es- 


840J  Cordero  á  estilo  del  campo  -M9er  corta*  un  solomillo  de 
cordero  en  lonjas  delgadas,  se  les  «cha  por  encima  sal  ypi- 
mienta,  sé  fríen  bien,  sé  colocan  en'  úñ  plato  f  se  cubren 
por  encinta  odn  manteca;:  se  pone  en  una  cacerola  un  poco 
de  harina, ;  caldo-  de-  puchero  y  un  poco  de  nués  moscada,  se 
deja  oooer  meneándolo  continuamente;  á  esto  se  unen  las 
lonjas,  se  vuelve  á  menear,  y  se  sirven  guarnecidas  con  pe- 
rejil frito.  .:    . 

341.  Pebre  de  camero. — Se  parte  el  carnero  crudo,  se  po% 
ne  á  freír  y  ya  que  está  bien  dorado  se  pica  'cebolla  y  ajo, 
se  "dora  en  la  misma  manteca  y  se  marta  ja  tomate  crudo,  se 
echa  en  lo- que  se  está  friendo;  ya'  que- está  todo  bien-  frito, 
se  le  echa  agua  para  que  oueaa  la  carne,  pero  no  debe  que* 
dar  aguado;  Se  le  agregan  especias,  pimienta  o>  Tabasco, 
ohtvo,  orágatio  y  aceite* 

342.  Patas  de  carnero  á  la  «litera.  ^-Téngase  presente 
ante  todo  que  las-  patas  son  difíciles  de  digerir  cuando  no-es- 
tán bien  cocidas.  '•  Ss  preoiao  limpiarlas  con  esmero  pasan* 
doia*  diferentes  veces  por  agua,  y  han  dé  totear  al  menos  cua- 
tro ó*  orneo  horas;  Se  frie  harina:  con  manteca  <5  mante- 
quilla á  que  no  se  dore,  y  luego  se  le*  echa  aña  cantidad  de 
caldo  desengrasado,  proporcionada  al  ntimero  de  patas  que 
se  quieran  ooeér,  :que  se  echará*  én  el  caldo'  después  de-  ha- 
borlas  escaldado  y  limpiado,  quitado  el  hueso  y  puesta*  á 
enfriar  en  age*  fresca.  -Después  de  eocer  cuatro  ó  cinco 
horas  á  ruege?  tsMd  se  retiran  de  la  lumbre  y  se  sacan  de 
la  casuéJev    Se  agrega  á  la  salsa  que  queda  en  la  casuela 


111 

nueva  manteo»,  algunas  cebolletas  y  perejil  picado*  muy 
menudos.  Si  la  salsa  no  queda  bastante  espesa,  se  le  añade 
un  poco  de  harina  mojada  con  caldo  desengrasado,  y  se  po- 
nen de  nuevo  las  patas  en  la  cazuela;  .  Guando  está  la  salsa 
muy  caliente,  pero  sin  hervir,  se  lían  en  ella  dos  ó*  tres  ye- 
mas de  huero.  Esto  debe  hacerse  momentos  antes  de  servir. 

343.  Patas  de  carnero  marvnadai  y /rifas. — Se  cuecen  y 
fríen  como  las  anteriores;  luego  se  sacan  de  la  cazuela  y  se 
escurren,  y  cuando  están  enteramente  frías  se  ponen  en  re* 
mojo  en  una  marinada  compuesta  de  vinagre,  sal,  pimienta, 
yerbas  finss  y  cebolletas  picadas.  Un  cuarto  de  hora  antes 
de  freirías  se  retiran  de  la  marinada. 

Se  prepara  separadamente  una  salsa'  compuesta  de  agua, 
harina  y  una  regular  proporción  de  manteca  6  aceite,  con 
sal  y  pimienta,  y  una  ciará  de  huevo  batida  á  que  haga  es* 
puma.  Se  revuelcan  en' está  salsa  las  patas  y  se  fríen  áque 
no  se  doren.  Al  servirlas  se  les  echa  encima  perejil  picado. 

344.  Pata»  de  carnero  d  la  yaüineta. — Se  escaldan,  lim- 
pian con  cuidado,  se  les  quitan  los  huesos  grandes  y  se  po- 
nen á  cocer  en  agua  con  sal  por  espacio  da  cuatro  6  cinco 
horas.  Cuando  estén  ¿iernas  y  que  los  otros  huesos  se  des- 
peguen  con  facilidad  se  puede  asegurar  que  están  cocidas; 
se  hace  entonces  una  salsa  de  pollo,  en  la  que  hervirán  po- 
co á  poco  una  media  hora  para'  que.  tomen  el  gusto;  se  espe- 
sa la  salsa  y  se  sirven  bien  calientes., 

345.  Cabeza  de  camero.  —Desunes  dé  limpia  se  parte  por 
el  medió  y  se  levantan  las  ternHlaé  con  él  cuchillo;  dentro 
se  mete  perejil  picado,  ajos  machacados  y  'pimienta,  sal '? 
un  poco  de  jamón  delgado;  se  ata  con  hilo,  después  sel» 


11* 

en  un  pliego  de  papel  de  estraza,  se  asa  sirviéndola  ood  una 
salsa  picante. 

S46b  Cobeaos  de  cordero  ó  cabrito.  —Abiertas  por  mitad,  se 
rellena  oon  un  frito  dispuesto  al  efecto,  el  cual  a»  prepara 
del  modo  siguiente:  se  piea  un  poca  de  perejil  y  ajo,  y  se  le 
añade  á  este  sal,  pimienta,  una  yema-  de  huero  y  jamón, 
dando  al  todo  una  vuelta  por  la  sartén  con  manteca.  Una 
ves  rellenas  las  cabesas  se  .-untan;  por  fuera  con  sumo  de  li- 
món y  manteca,,  después  de.  lo  cual.se  atan  coa  un  hilo,  y 
envueltas  en  papel,  se  colocan  en,  el  asador,  en  el  que  per* 
manecerán  hasta  estar  tiernas. 

347.  Cabeza  de  carnero.— Pospues  de  cocida  la  caben  se 
le  sacan  todos  los  huesos;  y  Ja  carne,  sesos  y  lengua,  junto 
con  un  pedazo  de  lomo  de  puerco  que  se  tendrá  ya  oocido, 
se  pica  á  que  queden  pedazos  chicos.  $e  pone  á  freir  un 
poco  de  tomate  picado,  ajos  y  cebolla  en  aceite  y  manteca. 
Así  que  está  frito  se  revuelve  lacajrne  y.  se  aparta.  Se  unta 
una  cazuela  con  manteca,  y  se  echa  la  carne  extendiéndola 
á  modo  de  torta,  procurando  que  quedé  hueca.  Se  le  echa 
por  encima  unas  gotas  de  limón,'  pen  rallado  revuelto  con 
pimienta  molida  en  seco,  un  poco  mas  de  aceite  y  manteca 
y  sé  pone  entre  dos  fuegos  á  qué  se  dore. 

846.  Albóndigas  de  carnero.  -^Se  pica  la  carne  de  pierna 
con  tocino  gordo,  perejil  y  ajos  verdes,  si  pueden  ser,  pan 
rallado  y  queso,  especias,  sal,  azafrán,  huevos  crudos,  ama- 
sándolo todo  bien;  se  hacen  las  albóndiga*  en  un  pocilio  6 
entrp  4o8  oucharas,  j«  se  ponida,  cocer  .en  caldo.  .Cuando 
estén  cocidas,  se  ]^e^  avellanas,  desatándo- 

la con  un,  popo  de  agrio,  fajándolas  que  den  un,  hervor.    . 
.  , 3(s^M^Mtoia^tttas  de  carnero  Jrito*.i— Se  pica  la  carne  y 


11? 

se  afiade  una  miga  de  pan  mojaba  en  leche,  papas  cocidas, 
yerbas  finas,  sal,  pimienta  y  dos  ó  tres  yemas  de  huevo;  io- 
do se  mezcla  mucho,  y  se  forman  las  albondiguillas,  que  se 
rebotan  con  miga  de  pan.  para  freirías;  se*  sirven  también 
con  una  salsa  picante  6  de  jitomate. 

360.  Albóndigas  de  carnero. — A  una  libra  de  pulpa  se  le 
agrega  como  una  mitad  de  carne  do  puerco;  y  otra  de  ja? 
mon  gordo.  Se  pica  todo  junto  á  que  quede  gordito,  revol- 
viéndole clavo,  pimienta  y  canela,  todo  molido,  almendras 
peladas  y  picadas,  pasas,  aceitunas,  alcaparras,  y  pidones. 
Amásase  todo  con  dos  huevos-  crudos,  se  hacen  los  albondi- 
gones  larguitos,  se  revuelven  con  harina  y  se  fríen  con  man- 
teca. El  caldo  en  que  se  cuecen  se  hace  asando  unos  jito- 
mates que  se  muelen  con  nueces  secas  y  almendras;  después 
de  frito  esto  se  le  agregan  piñones  sin  freir,  clavo,  canela  y 
ya  todo  junto  se  fríe»  echándole  después  agua  suficiente  á 
que  cuezan  los  albondigones.  Cocidos  estos  y  al  irlos  á  qui- 
tar de  la  lumbre  se  les  agrega  un  poco  de  vino  de  Jeres,  ta- 
pando la'oazuela  para  que  la  carne  no  se  evapore.  Se  ador- 
nan con  chiles  en  vinagre,  y  aceitunas. 

851.  Lengua  dé  camero. — Se  escaldan  .y**,  mechan  con 
tocino  delgado,  y  cuando  estén  á  medio  cocer  se  les  quita  el 
pellejo,  se  vuelven:  á  dejar  cocer  media  hora  á  fuego  lento, 
y  se  sirven  calientes  con  una  salsa  de  pebre,  aceite,  perejil, 
laurel,  pimiento  y  vinagre* 

862.  Lengua  de  carnero  en  parrilla. — Cocidas  como  se 
ha  dicho,  se  parten  en  rebanadas  dos  ó*  tres  cebollas  y 
se  echan  en  manteca  con  ttn  pufiadito  dé  harina;  se  re- 
mo jan  en  caldo  ¿  vino  blando,  añadiendo  ajos,  perejil  y 
cebolletas  picadaí rmuy  menudamente)  sal  y  pimienta,  tu- 

la  ooonraa  pobluta.— tom.  i. 


114 

m-y  dé  limón,  y  te  ponen  en  la  parrilla'  frísta  que  este*n  en 
panto.  •      :    •  ,  -.-.  ■'=■•  .  .!• 

363.  Oriadiüae  de  carnero  fritas.-^  Abierta*  "1m  criadillas 
de  carnero  6  cordero-,  sé  les  quita  1*  primera  y  segunda  tela 
y  se  ponen  á  cocer  con  agua  y  sal,  y  después  de  escurridas 
se  fríen  en  aceite,  volviéndose  -después  á>  escurrir:  se  baten 
unas  yemas  de  huevo  con  un  polvo  de  ¿iarina'y  sal,  se  mo- 
jan y  se  vuelven  á  freir>  estando  el  aceite  muy  caliente;  se 
sirven  con  canela  y  azúcar. 

.  364.  Otra»  criadilla*  de  eariíeroi—Be  cuecen  las  criadillas 
con  chícharos,  se  pica  cebolla' y  jitomate  con  un  poco  de  pe* 
rejil;  se  echa  en  uña  cazuela  con  'manteca  á  que  se  fria,  y 
se  leí  éehan  los  chícharos;  antes  de  que  aechen  de  cocer  se  le 
eohápOÁ*  criadillas;  el  caldillo  ha  4*quedár«speeo,rae  ador- 
na con  ohiles,  aceitunas*  y  alcaparras. . .  * 

366.  Fricando  dé  earnebo^-Jte  clavetea)  el  carnero  como" 
para  estofado;  con  jamón*  ajo  y  pimienta;; después  se  san- 
cocha con  manteca  yaceite,  una  poca  de*  eebolla- rebanada 
y  jitomate.  Junto  con  el  saneochoy  ya  echado  envía,  bllk  se 
muele  laurel,  perejil,  tomillo^  orégano,  yerbabuena,  una  ca- 
beza de 'ajos  asada,  cominoa,  sal  y  vinagm-competente;4e  ta- 
pa la  ollayél  vacovrio  en  la  cazuela  se  espesa  oon  un  poco  de 
harina  dorada  en  nianléoa;  y  no  tai  ^e  quedar .  muy  seco: 

.     TERNERA.    ■  *• ' 

•  ••.•■  .    ••  í  ,    .  .       ■ 

■  •        •  ■ 

*  •  ••••  .      *  m  •■■  I  •       *  ■ 

366.  Ternera  ata4a.~~$$  cortan  pedazos  •  como  de;  media 
libray  se  ponen  «H  un*  cazuela.  con  lumbre  arriba  y.  ¿bajo 
para  que  se  ase  poco  ^  jkk»^  v<juan4o  ,«*té  medio  asada,  se 

.«    :    .  .'.i-m: 


115 

fríe  tocino  gordo,  poniéndolo  en  la  cazuela  con  ajos  macha- 
cado*, perejil,  pimienta,  znmo  de  limón,  sal  y  una  pequeña 
cantidad  de  agua,  removiéndola  de  ouanofo  en  cuando  para 
qae  se  ante  por  todas  partes;  pero  si  la  ternera  que  se  ha 
de  asar  esturiese  gorda,  soasará  expolvoreándola  primero 
con  sal,  y  cuando  este*  medio  asada  se  la  quita  la  humedad 
qué  abitó  al  fuego  y  se  le  echa  un  poco  de  manteca  y  vino 
blanco  6  aguardiente;  si  no  hubiere  manteca,  puede1  ponerse 
aceite  bueno.  « 

357.  Trozo  dé'teritem  átaprúvtntal. — Póngase  enana  ca- 
gúela el  trozo  de  ternera,  can  un  cuartillo  de  aceite,  sal,  pi- 
mienta y  un  puñado  de  yerbas;  cuezase  á  fuego  lento  y  re- 
muévase i  menudo  para  que  tonje  'oolor/'cúando  está  bien 
cocido  se  sirve  con  salsa  italiana^  añadiéndola  el  resto  de  la 
primera. 

B58. '  Qniíado  dé  temerá. — Partidas  lasradones,  se  lavan 
y  echan  en  uña  cazuela  coa  sumo  de  naranja  ó*  limón  y  sal 
por  espacio  de  una  hora,  pasado  cuya  tiempo  se  lavan,  en 
otra  cazuela  se  fríe  cebolla  monada  y  perejil  con  aceite,  pi- 
mienta en  polvtt'  y  jamón,  y  con  esto  se  clavetea  la  carne, 
que  se  sancocha  en  manteca;  se  le  echar  jitomate  sin  pepita, 
la  carne  y  unas  rebanadas  de  zanahoria*-  se  agrega  agua,  y 
luego  clavo,  canela  y>pimienta  todo  jnqlidrt  •'  Ha  da  quedar 
con  poóo'caMk). '-  Al  llevarlo  á  la  mesa  se-aftade  vinp  car- 
íon,  aoettanasv  chiles  mso:  vinagre,  alcaparra**  pasaay  al- 
mendras. .'•;..  if:.  ..  .     . 

889. '  Otro.  —Se  pone  nsariteoa  enmna.osaujdla  y  cuando  es- 
tá  biett  caliente  unJpoco  de  aje-  rehaaado  y  cebolla  rebana- 
da también,  jitomate  picado;  perejil  :yíUAas  hojas.de  yerba- 
buena;     Ya  que  está  (rito  ekreeaudo.  sé  le  echa  la'  carne  en 


lie 

rebanadas  muy  delgada*  y  otrastde  jamón;  se  deja  freír  y  m 
le  agrega' vinagre  de  Castilla  con  una  paite  igual  de  agua, 
y  luego  clavo,  canela  y  pimienta  en  polvo.  Antes  de  servir- 
lo se  le  aumenta  vino  de  Jerez.  El  caldo  ha  de  quedar  ca- 
si seco.     Se  adorna  con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

860.  Chtúado  de  ternera. — Se  parte  la  pulpa  en  rebanadas 
y  se  echa  en  una  cazuela  una  cucharada  de  manteca,  cebo- 
lla picada,  ohorizos,  jamón,  ajo,  perejil,  orégano,  tomillo 
picado  y  un  poco  de  culantro  verde;  todo  se  fríe  y  se  le  echa 
agua,  se  muele  clavo,  pimienta,  canela  y  unas  rebanadas  de 
pan  frito  en  manteca.  Debe  llevarse  á  la  mesa  con  el  caldi- 
llo espeso,  echándole  antea  tm  poco  de  aceite.  Se  adorna 
con  aceitunas,  chiles  y  alcaparras. 

861.  Quitado  de  ternera  llamado  .de  '•  danzante». — Se  hace 
pedacitos  la  carne  y  se  ponen  eñ  una  olla  con  todo  recaudo, 
tajadas  de  chife  verde,  garbanzos  remojados,  pedazos  de  ja- 
món, especias  finas  molidas,  manteca,  vinagre  y  perejil. 
Todo  junto  se  pone*  la  lumbre  en  fuego  manso,  se  tapa  la 
boca  de  la  olla  con  una  cazuela  que  tenga  agua  para  que  en 
caso  de  que  el  guiso  se  seque  ae  le  eche  de  esta  misma  agua 
y  se  menee  con  la  misma,  olla. 

862.  Ternera  een.*aleá  blanca.  —-Se  parte  ternera  asada  en 
pedazos  pequeftitoa  y  se  echa  en  una  cacerola  con  un  poco 
de  manteca,  se  expolvorea  con  harina,  y  cuando  estuviere 
frito  se  desata  con  la  cantidad  suficiente  de  agua*  añadien- 
do sal,  pimienta,  un  manojito  de  yerbas,  y  se  deja  cocer 
hasta  que  se  consuma  un  poco  el  caldo;  en  el  que  quede  se 
desatan  unas  yemas  dVbuevos  y  se  echa  un  poco  de  vina- 
gre; también  se  puisden:^ohar  cebolletas.  . . 

868b  Ternera  teto/oda.— <&e  parten  pedacito*. pequeños  de 


/  -Uf 

la  carne  magra  de  lomo  ó  de  piemaí,  se,  fríen  en  manteca, 
se  echan  en  la  olla,  y  con  la  grasa,  que  hubiere  quedado,  te 
fríe  cebolla  bien  picada;  échese  en  la  carne  y  también  un 
poco  de  Wno  blanco,  dos  granos  de  ajos  majados,  sal,  pere- 
jil, especias  y  unas  hojas  de  laurel;  se  pone  la  olla  á  fuego 
lento,  tapándola  oon  un  papel  y  una  tasa  de  agua  encima 
para  impedir  que  se  evapore;  se  deja  cocer  dos  horas  y  se 
retira  para  servirla. 

364.  Otra  estofada, — Se  corta  la  carne  en  rebanadas,  se 
pone  en  una  olla  oon  un  poco  de  manteca,  dientes  de  ajo 
enteros,  especias  finas  molidas  y  otras  en  grano,  se  le  aña- 
de un  poco  de  oebolla,  vino  carlon  y  vino  de  Jerez,  vinagre 
y  agua  con  la  sal  suficiente;  se  tapa  la  olla  con  un  papel  de 
estraza  y  un  plato  encima. 

365.  Otra» — Se  mecha  la  carne  oon  clavo,  canela,  pimien- 
ta, ajos  y  jamón  en  rajas;  ya  mechada  se  fríe  en  manteca, 
se  mondan  unos  nabos  y  fríen  hasta  que  se  doren  y  se  mue- 
le todo  oon  pan  frito.  Se  echa  á  freir  en  una  olla  cebolla  y 
ajos  partidos  en  gajos,  se  le  agrega  vino,  vinagre  y  sal,  se 
le  pone  agua  y  se  deja  cocer  á  dos  fuegos  mansos. 

366.  Oirá  estofada. — Se  pone  la  carne  en  pedazos  á  freir 
con  manteca;  un  poco  de  jamón  magro  y  cebolla,  después  se 
pasa  todoá  una  olla  con  ajo  machacado,  sal,  perejil,  hojas 
de  laurel  y  especias;  se  tapa  bien  y  cuando  principie  á  cocer 
so  le  echa  un  poco  de  vino  blanco;  debe  reducirse  el  caldo 
á  una  mitad  para  que  esté  en  su  punto. 

367.  Fricando  de  ternera. — Lávese  la  pulpa  de  un  pemil 
de  ternera,  procurando  que  esté  cubierta  del  gordo  que  la 
envuelve;  machaques*  etffcre  dos  trapos,  méchese  contras 
de  tocino  y  póngase  en  la  cazuela  con  legumbres  y  un  ma- 


118 

nbjíto  de  perejil  y  oebolteps*  bámedeoe  con  caldo  de  sus- 
tancias ó  del  ooaido>y 'hágase  cocer  «cuatro 1  Inoras»  espdmese 
la  salía  y  cuélete,' volviendo  á  unirla,  y  «déjese  menguar  en 
fuego  pooo  vívoj  despjes  ae  sirve»,  adornando  el  platón  oon 
acederas;  del  mismo,  modo  se  propasan  loe  eolomilloe  de  ter- 
nera* *•       '-'-íw  r.r.'-    <    ;••  ».,   i  .   •    •  •     .  *.. 

868.  OtroJHóandó  con  aceJgtu.— *8e  clavetea  con  jamón, 
unas  rebanadas  de  carne,  se  echan  en  una.  cacerola  con  un 
pooo  ¿e  sal,  hojas  de  laurel*  orégano,  tomillo  y  cebollas,  en- 
teras. Se  sancocha  *todo  junio-  en .  manteca  y  luego  se  le 
echa  agua  y  unas  rebanadas  dé  zanahoria.  Se  tiene  .acel- 
gas cocidas  aparte  y  ae  eeprimen  bien;  se  muelen  oon  almen- 
dras y  se  fríen  en  una  cazuela  oon.-  manteca  y  un  poco  de 
cebolla  picada.  Ta  que  la  carne  está  oocidat  se  le  .echa  la 
salsa  de  acelgas  y  se  coloca  el  gubo  en  un  platón.  Sé  mue- 
len luego  especias  oon  riño  y  se  rocía,  la  carne  oon  esto.  Se 
adorna  oon  chiles  y  aceitunas. 

969.  Fricando  teco  efe  ternera  con  guefcAaa— rSe  toman  pul- 
pas de  ternera  .y  se  redondean  amanera  de  huesos,  se,  echan 
en  zumo  de  naranja  y  se  «tiene  asi  todo  un  día. .  Al  otro  dia 
se  embarran. de  limón,- se  clavetean  con  jamón  y  se  ponen  á 
cocer  en  una  cazuela  oon.  «*  tanto  •  de  agua  y  otro  de .  vina- 
gre con  unas  hojas  de  -bar*},  tomillo,  ajos  machacados,  bas- 
tantes, especias,,  canela*  «lavpj  y  pimienta»  y  una  cuchara- 
da de  manteca  y  rebanadas  de  Zanahoria.  Ya  cocido  se.  un- 
ta de  aceite  y  manteca,  y  se -poneA  do*  fuegos  taque  medio 
dore.  Debe  llevarse  á  la  mesa  entero,  sohra\un*.  salsa,  de 
quel|tes  cocidos  y  sazonados -con  ajo,:  oebolla  y  un  pooo  de 
oosnioov  Han  de  quedar  secos  para  servirse,  y  se  adornan 
con  rebanadas  de  zanahoria»  •   . 


110 

..  370.  Migado  de  ternera  á  la  italiana. — Se  saltean  pedazos 
de  hígado  en  un*  cacerola  oon  buen  aceite,  se  expolvorean 
con  sal»  volviéndolos  sfp  romperlos,,  se  escurren  después  de 
bien  cocidos,  se  ponen  en  un  platón,  regándolos  oon  una 
salsa  italiana  y  tzump  de  limón, 

.  $£!•  Hígada  de.  ternera  .en.  amador.—  Máchese  un  hígado 
con  pedazos  bastante  gordos  de  jamón  bien  sazonado,  y  adó- 
bese  en  buen  aceite,  tomillo,  laurel,  perejil  y  cebollas;  en- 
vuélvase en  un  papel  engrasado,  después  de  puesto  en  el 
asador  y  bien  sujetado  oon  pasadores;,  se  sirve  bañado  y  so- 
bre una  salsa  á  la  pebre. 

372.  Migado  de  temerá  en  sartén. — Córtese  un  hígado  de 
ternera  en  rebanadas,  que  se  pondrán  en. la  sartén  con  ajos 
tiernos,  perejil  y  cebollas  picadas  y  un  pedazo  de  manteca; 
póngase  á  un  fuego  vivo,  añadiendo  un  polvito  de  harina; 
cuando  sé  vea  que  el  hígado  se  punga  duro,  vuélvase  y  hu- 
medézcase con  vino  tinto,  se  sazona  con  aal,  pimienta,  aña- 
diendo un  poco  de  agraz  y  cuando  vaya  á  hervir  se  retira 
del  fuego.  Si  la  salsa  está  muy  espesa,  se  le  añade  un  poco 
del  caldo  del  puohero  ó  de  sustancias. 

373.  Migado  de  ternera  en  maso. — Se  prepara  y  acomoda 
como  el  anterior,  excepto  que  se  hace  en  mantequilla  ama- 
sada  con  harina  y  desleída  en  caldo,  en  lugar  de  hacerlo  en 
manteca  caliente. 

374*  Costillas  de  ternera  en  asador,  d  las  yerhas finas. — Pre- 

»    -  • 

párese  bien  un  costillar  de  .ternera;  méchese  el  solomillo  oon 
tocino  bien  .fino,  póngase  á  adobar  dos  ó  tres  horas  con  pe- 
rejil, cebolla,  tomillo,  laurel,  chiles  y  ajos  picados  muy  me- 
nudos,  sal,  pimienta,  nuez  moscada  raspada  y  un  poco  de 
aceite;  ouando  haya  tomado  el  gusto  •  póngase  en  el  asador, 


120 

m 

y  viértase  encima  todo  el  Adobo,  que  m  sostendrá  con  un 
papel  bien  engrasado;  se  aiá  á  fuego  lento;  después  se  quita 
el  papel,  del  qué  se  raspan  las  yerbas  que  se  le  hayan  pega- 
do, lo  mismo  que  á  la  carne,  y  éstas  se  pondrán  en  una  ca- 
cerola con  un  poco  de  jugo,  otro  poco  de  vinagre,  manteca 
amasada  con  harina,  sal  y  pimienta;  se  hace  ligar  esta  sola 
con  el  fuego  y  se  echa  sobre  el  costillar,  después  de  cubier- 
to de  miga  de  pan,  con  manteca  derretida  y  mezclada  con 
yemas  de  huevos. 

375.  Costillas  á  la  mÜanaa. — de  preparan  obn  cuidado 
las  costillas.  Se  bañan  con  manteca  derretida  y  se  cubren 
con  miga  de  pan  aderezada  con  sal  f  pimienta.  Se  baten 
huevos  en  proporción,  yema  y  olára,  y  se  mojan  en  ellos  las 
costillas  ya  empanadas  y  luego  se  vuelven  á  empanar  con 
miga  de  pan  y  queso  de  Flandes.  Se  ha  de  cargar  mucho 
esta  segunda  empanada.  Derrítase  en  una  cazuela  manteca 
6  mantequilla  y  £  ríanse  en  ella  las  costillas  á  que  tomen  buen 
oolor.  Pónganse  luego  en  el  platón  con  macarrones  y  báñe- 
se todo  con  salsa  española  mezclada  con  vino  de  Madera  y 
unas  cucharadas  de  jugo  de  asado. 

376.  Costillas  con  chícharo* — Se  fríen  en  manteca  y 
aceite.  Ya  fritos  se  les  echa  una  cantidad  regular  de  ajo 
sumamente  picado  y  cebolla  muy  menuda  también;  se  deja 
freir  y  se  le  agregan  chícharos  cocidos  á  que  se  frían  tam- 
bién. Ta  que  están  se  les  echa  agua  suficiente  para  que 
cuezan,  se  retiran  y  se  deja  espesar  la  salsa.  Se  unta  sepa- 
radamente una  cazuela  con  manteca  y  mantequilla,  se  echa 
encima  una  capa  de  pan  rallado  con  queso  añejo  y  se  rocía 
con  aceite;  luego  se  pone  encima  de  esto  la  salsa  en  que  es- 
tán las  costillas,  y  sobre  la  salsa  las  costillas,  que  se  cubren 


121 

con  otra  capa  de  pan  rallado  y  queso,  y  un  poco  mas  de  acei- 
te.    Se  ponen  á  dos  fuegos,  se  dejan  secar  y  se  sirven. 

377.  Costilla*  empapelada*. — Se  ponen  un  rato  en  in- 
fusión con  Vinagre  6  limón.'  Luego  se  unta  un  papel  con 
manteca  y  se  le  echa  bastante  pan  molido,  perejil  picado, 
pimienta,  sal  y  unas  lonjas  de  jamón;  encima  de  esto  las 
costillas,  que  se  cubren  con  mas  perejil,  pan  y  jamón,  se 
envuelven  én  el  papel  y  se  ponen  en  la  parrilla. 

378.  Costillas  de  ternera  al  natural. — Se  untan  de  mante- 
ca, se  expolvorean  con  sal  y  pimienta,  se  asan  en  parrilla 
por  los  dos  lados  y  se  sirven  sin  salsa. 

379.  Costilla*  asada*  con  pan  rallado.  — Se  preparan ,  aplas- 
tan y  sazonan  con  sal  y  pimienta  en  grano;  se  derrite  en 
manteca  y  se  moja  en  ella  cada  costilla,  se  ponen  en  segui- 
da en  un  platón,  en  que  estará  el  pan  rallado,  se  les  di  vuel- 
tas en  el,  póngase  en  la  parrilla  A  fuego  muy  lento  para  que 
no  se  tueste  demasiado  el  pan:  media  hora  es  suficiente  pa- 
ra que  estén  bien  cocidas 

380.  Costilla*  de  ternera  d  la  papillote. — Córtense  las  cos- 
tillas bastante  delgadas,  pónganse  sobre  papeles  oortados  al 
efecto,  se  sazonan  con  sal,  pimienta  y  ajos,  bien  picado 
todo,  y  pedacitos  de  manteca;  se  les  envuelve  en  el  papel, 
dejando  fuera  el  hueso,  se  ponen  sobre  la  parrilla  á  fuego 
lento,  y  se  sirven  con  sus  mismos  papeles  puestos. 

381.  Costilla*  de  ternera  empanadas. — Se  ponen  en  adobo 
por  dos*horas  con  aceite,  yerbas  finas,  pimienta,  sal,  zumo 
de  limón  ó  vinagre;  después  se  las  envuelve  en  miga  de  pan 
y  se  ponen  á  tostar  á  fuego  lento,  sirviéndolas  secas  6  con 
la  salsa  que  se  quiera. 

382.  Costillas  de  ternera  mechadas. — Se  aplanan  y  mechan 


122 

t     m 

con  tocino,  cortado  .en  tronos  delgados,  haciéndolas  cocer  co- 
mo la  ternera  mecjiaclaj  se  serven  con  todas  especies  de 

salsa. 

:«T         " '  *   '  '  ' 

383.  Costillas  de  ternera  en>papel.  —Se  rebozan  por  amitos 

ladoa  con  una  miga  ,de  .pan,  manteca,,  perejil  y  oebojleta,  to- 
do mUy  picado,  pimienta  y  sal,  cubriéndola*  con  tajadas 
delgadas  ¡de  tocino;  necho  esto,  se  envolverán  en  papel  blan- 
co untado  con  aceite  ó  manteca,  se  ponen  en  parrillas  para 
que  se  asen  á  fuego  lento  y  se  sirven  en"  el  mumo  papel. 

384.  Costillas  de  ternera  en  yerbas  finas. — Se  ponen  en 
una  cazuela  con  manteca,  sal  y'  espeqias;  háganse  saltar  en 
la  manteca  cinco  minutos,  se  tendrán  prevenidas  y  muy  pi- 
cadas las  yerbas  finas,  y  se  echa  la  mitad  encima  de  las  cos- 
tillas,  se  vuelven  del  otro  lado  y  se  echa  la  otra  mitad,  y 
cuando  están  asadas  se  condimentan  con  ácido  de  limón. 

386.  Costillas  i  la  leonesa.. — Se  mechan  con  tocino,  pepi- 
nillos y  hebras  de  anchoas,  poniéndolas  en  adobo  con  acei- 
te, por  una  hora  á  lo  menos,  con  sal,  pimienta,  ajos  tiernos, 
yerbas  finas  y  perejil,  todo  picado;  después  se  rebosan  con 
lonjas  de  tocino  y  se  hacen  cocer  en  adobo. 

Se  pondrá  un  poco  de  manteca  y  un  puñado  de  harina  en 
una  cazuela;  yerbas  finas  y  ajos  picados,  mojándolas  con  el 
caldo  bien  desengrasado;  y  para  servirle  se  añade  el  zumo 
de  un  Timón  6  unas,  gotas  de  vinagre. 

386.  Costillas  d¿  cerdo  en  parrilla, — Córtense  las  costillas 
como  las  de  ternera,  dejando  algo  de  gordo,  aplástense  dán- 
dolas  una  buena  forma,  espolvoréense  con  sal,  y  pónganse 
en  ía  parrilla..    Se  sirven  con  ;una  salsa  ÍTe  tomate  6  de  pe- 

•  '  • : "  ■  .'•"•'  I  .•:'•■••         ■  *  . 

pinillos. 
387*  CosWkis  de  carnero  con  salsa  de  jitomates. — Después 


123 

de  preparadas  y  asadas,  según  se.  ha  dicho  anteriormente, 
se  colocan  en  un  platón  poniendo,  en  cada  .  intervalo  tosta- 
das de  pan  frito;  y  luego  se  rocia  con  us»  salsa  de:  jitomate 
pasada  por  tamiz. 

388.  Costillas  empanadas.  —Preparadas  las  costillas,  se 
empapan  en  aceite  ó*  manteca  desleída,  y  se  ponen  en  las 
parrillas,  después  de  haberlas  pasado  antes  por  miga  de  pan. 

389.  Costillas  mechada*. — Es  necesario  cortarlas  dejándo- 
las mas  carne,  y  después  de' haberlas  mechado  menudamen- 
te con  lonjas  muy  finas  de  jamón,  sirviendo  para  esta  ope- 
ración las  agujas- de  mechar,  se  pasaran  por  manteca  para 
afirmarlas,  6  sea  rehogarlas  un  poco.  Se  les  dejará  que  es- 
curran la  manteca,  y  cuando  estén  frías  se  arreglan  las  ex- 
tremidades y  se  colocan  en  la  cazuela  con  un  poco  de  caldo, 
se  les  dará  un  par  de  hervores  y  se  aderezan  con  pan  frito, 
y  se  sirven  con  cualquiera  salsa. 

390.  Castillas  caseras. — Se  preparan  y  se  rehogan  en  ca- 
zuela 6  cacerola,  con  manteca  fresca  6  aceite,  un  poco  de 
caldo  después;  se  cubren  y  se  dejan  cocer  lentamente  des- 
pués de  sazonadas.  Cuando  están  cocidas  se  sacan;  el  caldo 
se  desengrasa  y  se  mezcla  con  un  poco  de  harina  tostada,  y 
después  de  haberle  dado  un  hervor  para  que  espese,  se  em- 
papan en  ¿1  las  costillas  y  se  sirven. 

391.  Costillas  convite).— Se  guisan  con  vino  de  Jerez, 
Málaga,  etc.,  é  igual  cantidad  de  caldo;  se  sazonan  y  cuan- 
do estén  cocidas  se  sacan  de  la  cazuela  ó  cacerola,  se  colocan 
en  un  platón  y  la  salsa  se  pasa  por  un  tamiz  para  echarla  en- 
cima. 

392.  Costillas  tostadas. — Después  de  preparadas  y  aplas- 
tadas, se  pondrán  en  un  adobo  en  aceite  con  sal,  un  mano- 


124 

jo  de  perejil,  hojas  de  laurel, 'una  cebolla  cortada  en  rue- 
das. Al  cabo  de  veinticuatro  horas  ae  pone  en  unas  parri- 
lla» «1  fuego  vivo,  y  se  lea  dá  vuelta  para  retirarlas  cuando 
estén  á  punto  y  servirlas  con  su  propia  salsa  6  con  un  pi- 
cante, echando  en  ella  pepinillos  encurtidos  en  vinagre  y  pi- 
cado*. 

393.  Costillas  dé  ternera  empapeladas,—  -Córtente  las  cos- 
tillas bastante  delgadas',  pónganse  sobre  papeles,  cortados 
al 'efecto,  te  sazonan  con  sal,  pimienta,  perejil  y  ajos,  bien 
picado  todo,  y  pedacitos  de  manteca;  sé  las  envuelve  en  el 
papel,  dejando  fuera  el  hueso,  se  ponen  sobre  la  parrilla  á 
fuego  lento  y  se  sirven  con  sus  mismos  papeles  puestos. 

394.  Costillas  en  sartén.  — Después  de  haber  cocido  las  cos- 
tillas á  fuego  lento  se  ponen  á  escurrir  en  la  cacerola  que 
contiene  el  jugo  que  han  dejado;  se  añade  caldo,  se  sacona 
con  sal,  pimienta,  un  ajo  fresco  picado  muy  menudo,  se 
vuelven  á  poner  al  fuego  y  se  añaden  tres  yemas  de  huevo 
batidas,  un  poco  de  vinagre,  otro  poco  de  nuez  moscada  ra- 
llada y  se  procura  que  no  hiervan. 

395.  Costillas  d  lo  cocinero. — Dos  6  mas  costilla»  buenas 
se  cuecen  en  una  cacerola  con  tocino  cortado  en  lonjas  muy 
delgada»  y  manteca;  después  de  algún  tiempo  se  mudan  á 
otra  cacerola  para  que  suelten  la  grasa,  y  cuando  estén  coci- 
das se  ponen  en  un  plato:  en  el  caldo  que  han  dejado  se 
echa  un  batido  de  yema»  de  huevo,  perejil  picado  muy  me- 
nudo, ajos  frescos,  sal,  un  poco  de  chile  verde,  en  caso  de 
que  el  tocino  sea  muy  fresco,  y  un  ácido  cualquiera:  después 
de  haber  tenido  esta  salsa  un  rato  al  fuego,  se  echa  en  las 
costillas. 

396.  Costilla*  con  lenguas.  —Después  de  cocidas  las  oosti- 


125 


lias  se  fríen  hasta  que  queden  en  buena  sacón;  antes  de  ser* 
virlasseoortan  lonjas  de  una  ó  mas  lenguas,  guisadas  de 
antemano,  colocándolas  enmedio  y  en  los  intervalos  de  las 
costillas;  esto  no  es  mas  que  un  método  para  diferenciarlas 
y  aumentar  este  plato. 

397.  Costillas  empanadas  y  tostadas.—  Después  que  hayan 
estado  en  adobo  una  6  dos  horas  con  aceite,  yerbas  finas 
sal,  pimienta,  el  jugo  de  un  limón  y  unas  gotas  de  vinagre, 
se  les  polvorea  con  una  miga  de  pan  desecha  con  la  mano 
para  que  se  tuesten  á  fuego  lento  y  se  sirven  con  la  salsa 
que  se  quiera. 

398.  Costillas  empapeladas.  —Se  cortan  pedazos  qa6  ten- 
gan  cada  uno  dos  costillas,  se  saca  el  hueso  de  una  de  ellas 
y  se  deja  el  de  la  otra.  En  la  parte  mas  gruesa  de  la  carne 
se  abre  un  hueco  con  el  cuchillo  y  se  rellena,  de  picadillo 
bien  sazonado,  se  le  da  una  puntada  para  que  no  se  caiga  el 
picadillo,  se  unta  todo  el  pedazo  con  vino,  vinagre,  mante- 
ca en  que  se  hayan  frito  ajos  y  ¿d,  cúbrase  con  pan  rallado 
revuelto  con  ajos  molidos,  salt  pimienta,  clavo/canela  y  pe- 
rejil muy  picado;  envuélvase  cada  pedazo  en  un  papel  un- 
tado de  manteca,  póngase'  en  una  tortera  untada  también 
y  métase  en  el  horno. 

399.  CostMas  en  vino.— Pónganse  las  costillas  con  jito- 
mate, vino  de  Jerez  y  perejil  picado.  Sancóchese,  f ríase  un 
poco  de  jamón  rebanado,  se  asa  jitomate  y  se  muele.  Se  po- 
ne manteca  en  una  sartén  y  se  le  echa  un  puñado  de  harina, 
luego  el  jitomate  hasta  que  quede  muy  frito;  después  se 
echan  las  costillas,  el  jamón  y  el  perejil  á  que  se  refría  to- 
do junto;  añádase  luego  el  vino  á  que  hierva  á  fuego  man- 
so.   Se  polvorean  con  pimienta  muy  delgada  y  sal. 


126 

400.  JH.  as  codiñas.  —So '  apalean ,:  se  les  unta  limón ,  tal 
y  pimienta,  so  asan  á  la  parrilla  y  al  irlas  volteando  para 
untarles  manteca  se  les  va  echando  un  polvo  do  pan ;  ya  qao 
estén  bien  asadas  se  colocan  en  el  platón.  Se  pone  á  cocer 
un  jitomate  y  una  cebolla,  se  martajan  con  alcaparras,  un 
pedazo  de  pan  frito,  chiles  verdes,  clavos  y  especias  moli- 
das; se  fríe  todo  én  manteca  y  se  rocían  con  ellas  las  costillas. 

401.  Otras. — Se  pone  á  cocer  con  jitomates  picados j  ce- 
bolla, ajo  y  perejil,  agua,  vinagre,  vino,  manteca  quemada, 
jamón  en  rájitas,  pimienta  de  Tabasco,  un  ramillete  y  sal; 
se  dejan  cocer  las  cebollas  con  todo  hasta  que  se  forma  sal- 
sa. Entonces  sé  sacan  tas  costillas  limpias.  Ya  se  tiene  fri- 
to el  picadillo  don  todo  'lo  dicho,  se  cubren  con  él  las  eos* 
tillas,  se  les  echa  pan  mezclado  con  huevo  batido,  se  envuel- 
ven  en  un  papel  y  sé  ponen  en  una  sartén  con  manteca  que- 
mada. Se  porien  A  dorar  con  rescoldo  abajó  y  lumbre  arri- 
ba y  se  sirven  secas,  poniéndolas  al  rededor  del  platón  con 
la^salsa  en^el  centro.     ' 

402.  Otras, — Se  muele  un  chile'  m  ülato  remojado  con  ajos 
crudos,  pimienta,  un  poco  de  tomillo,  un  pedazo  de  pan  re- 
mojado, otro  de  cebolla  y  una  yema  de  huevo  cocida.  Se 
frie  todo  en  manteca,  se  le  echa  un  poco  de  agua,  se  rebo- 
za la  carne  de  moclo  que  quede,  él  hueso  muy  chico,  sé  ocha 
á  las  costillas  unas  gotas  de  limón  y  se  aplanan  bien.  Se 
echa  esta  salsa  eñ  una  cacerola,  con  mucha  lumbre  arriba  y 
poca  abajo.  Ya  cocidas  las  costillas  se  ponen  en  un  platón 
con  pan  tostado  y  se  bañan  con  la  salsa. 

40$.  Ot ntsjcón  chícharos* — Se'fríen^en  manteca  y  aceite. 
Ya  fritas  écheseles  una  cantidad   regular  de>jo  sumamente 
picado  y  cebolla  muy  picada  también;  se  deja  freír  esto  y  so 


127 

le  añaden  chícharos  cocidos  á  que  también  se  frían.'  Hecho 
esto  póngase  el  agua  suficiente  para  que  cueza;  ya  cocidos  se 
sacan  y  se  doja  espesar  la  salsa.  Se  unta  una  cacerola  con 
manteca  y  mantequilla,  se  echa  encima  pan  rallado,  se  po- 
ne una  capa  de  la  pasta,  un  polvo  de  queso  anejo  y  un  cho- 
rlito de  aceito,  luego  las  costillas  y  otra  voz  la  pasta  y  demás 
que  se  ha  dicho.     Se  ponen  á  dos  fuegos  y  se  dejan  secar. 

404.  Oirax. — Se  ponen  durante  una  6  dos  horas  con  acei- 
te, yerbas,  sal,  pimienta  y  un  poco  de  vinagre.  Al  sacarlas 
se  lemojan  bien  con  el  caldillo,  se  expolvorean  con  pan  ra- 
llado, se  embarran  con  lo  mismo  y  se  ponen  en  la  parrilla 
á  fuego  manso.     Se  sirven  con  puré'  de  papas. 

405.  Costillas  con  pulque, — Se  atan  las  costillas  á  la  boca 
do  una  olla,  en  la  cual  se  echará  un  cuartillo  de  pulque  por 
cada  seis  costillas,  medio  pocilio  de  vino  de  Jerez  y  otro 
tanto  de  agua,  ajos  machacados,  tomillo  mexicano  y  pimien- 
ta marta  jada.  Tápese  la  olla  con  un  trapo.  Hágase  una  sal- 
sa con  un  cuartillo  de  leche  y  un  puñado  de  harina,  y  éche- 
sele poco  á  poco  y  á  medida  que  se  van  calentando  las  cos- 
tillas á  que  queden  muy  untadas,  después  se  les  echa  pan 
rallado  y  se  fríen  en  manteca  que  se  haya  quemado  muy 
bien,  pero  que  no  mas  está  tibia  para  que  no  se  doren  mu- 
cho. Hágase  otra  salsa  con  jitomates  codidos  que  se  muelen 
y  bajan  del  metate  con  agua  limpia;  se  aettrona  un  poco  de 
cebolla,  se  refríe  mucho  el  jitomate  con  sal  y  un  poco  de 
perejil  muy  menudo.  Al  llevarlas  ó  la  mesa  se  les  agrega 
vino  de  Jerez. 

406.  fosos  á  la  matancera. — Después  de  bien  limpios  con 
sal  y  vinagre,  se  echan  en  una  cazuela;  en  la  cual  se  habrán 
frito  anteriormente,  seis  6  siete  ajos  con  manteca  y  cuatro 


128 

cebolla*  enteras,  hasta  que  unos  y  otros  se  vean  dorados, 
se  cuecen  los  sesos,  y  se  les  agrega  medio  vaso  de  vino  blan- 
co; igual  cantidad  de  caldo  del  puchero,  un  manojito  de  pe- 
rejil y  unas  hojas  de  yerbabuena;  déjese  tomar  el  gusto  de 
estas  yerbas  á  los  sesos  cociendo  un  poco;  sazónese  de  sal, 
y  se  sirve;  procurando  adornarlos  con  unos  plátanos  fritos 
cortados  en  ruedas. 

407.  Seto»  á  lo  santiaguero.  -¿Lávense  primeramente  con 
sal  y  vinagre  féchense  en  una  cazuela,  en  le  que  habrá  co- 
mo cuatro  vasos  de  caldo  del  puchero  y  dos  de  gallina;  añá- 
dase un  poco  de  perejil,  ajos  y  cebollas,  picado  tpdo,  unas 
ocho  6  diez  gotas  de  zumo  de  limón;  se  sazona;  pártense  en 
rebanadas  cuatro  huevos  duros;  se  deja  todo  cocer. el  tiem- 
po regular,  y  se  tendrá  un  plato  exquisito. 

498.  ¿Jesos  á  lo  pinero.  --Estando  limpios  y  bien  quitada 
la  tela  que  los  envuelve,  se  echan  á  cocer  en  una  cazuela 
con  agua  y  sal,  cuando  lo  estén,  saqúese  y  córtese  en  re- 
banadas no  muy  grandes;  báñense  en  huevos  batidos  con 
harina  y  un  poco  de  pan  rallado,  perejil,  cebollas  y  ajos  pi- 
cados muy  menudito;  se  penen  á  freir  con  manteca  hasta 
que  principien  á  dorarse,  y  entonces  se  les  echa  por  encima 
un  poco  de  canela  en  polvo  y  se  sirven. 

409.  Sesos  á  la  veracruxana. — Después  de  bien  limpios  se 
ponen  á  cocer  en  agua  y  sal,  se  cortan  en  pequeñas  rebana- 
das y  se  bañan  en  el  batido  que  de  antemano  estará  hecho, 
compuesto  de  tres  huevos,  manteca  derretida,  sal,  núes 
moscada,  pimienta  y  pan  rallado;  se  van  friendo  poco  á  po- 
co, y  cuando  se  vea  están  doraditos,  se  sacan  y  colocan  en 
un  platón  fécheseles  con  una  cuchara  un  poco  de  salsa  de 
jitomate,  clarita  y  plátanos  fritos  maduros. 


129 

410.  Sesos  de  ternera  á  la  gallineta.  -—Preparados  y  lava- 
dos como  los  precedentes,  se  cuecen  en  un  caldo  de  pollo, 
que  se  liga  con  yemas  de  huevos  al  tiempo  de  servirlos. 

Los  sesos  de  carnero  tienen  los  mismos  guisos  que  los  de 
ternera. 

411.  Guisado  de  ternera  con  sesos. — Partida  la  carne  se 
unta  una  sartén  con  mantequilla  y  se  echa  la  carne  con  ce- 
bolla rebanada,  zanahoria  picada,  tiras  de  jamón,  laurel 
machucado,  clavo,  pimienta  y  unas  gotas  de  limón,  mejora- 
na y  tomillo;  ya  que  todo  está  en  la  sartén  se  colocan  enci- 
ma bolitas  de  mantequilla,  se  le  agrega  caldo  del  puchero, 
y  conforme  se  van  secando  se  le  echa  otro  poco  hasta  que 
tenga  el  suficiente,  para  que  cueza  y  quede  seco.  Cuezanse 
aparte  unos  sesos,  piqúense  y  agregúense  al  guisado  para  ser- 
virlo. Se  adorna  con  alcaparras,  aceitunas  y  chiles  en  vinagre. 

412.  Setos  de  ternera  fritos. — Después  de  bien  preparados, 
quitadas  las  venas,  se  lavan  en  agua  cal  ion  te  con  sal  y  vi- 
nagre, dejándolos  enfriar  en  la  misma  agua  para  que  se  en- 
durezcan un  poco;  se  cuecen  en  una  cacerola  untada  de  to- 
cino, vino  blanco,  el  doble  de  caldo  de  sustancias  ó  del  pu- 
chero, perejil,  cebollas  y  algunas  rebanadas  de  limón  sin 
cascara  ni  pepitas;  después  de  cocidas  se  cortan  en  pedazos, 
se  rebozan  en  huevo  y  harina,  y  se  fríen;  se  sirven  guar- 
necidos de  perejil  frito  por  encima  y  por  debajo. 

413.  Sesos  de  ternera  á  la  cubana. — Tómense  cuatro  onzas 
de  manteca  y  óchense  en  una  cacerola,  póngase  al  fuego,  y 
cuando  se  conozca  está  en  un  temple  regular,  añádase  un 
vaso  de  vino  blanco;  so  limpian  los  sesos  con  sal  y  vinagre,  y 
se  echan  á  cocer;  se  fríen  unos  ajos  en  manteca  y  se  echan 
en  la  cazuela;  añádanse   unas  tazas  de  caldo  del  puchero, 

JJL   OOOXKSfta  FOBLAWA.—- TOK.—  L  9 


130 

un  poco  de  perejil  y  el  zumo  de  medio  limón,  después  de 
cocidos  se  apartan  7  cortan  en  rebanadas,  se  bañan  con  huo- 
vos  batidos  y  harina,  y  se  fríen;  se  les  echa  en  la  salsa  en 
que  cocieron,  y  rebozándolo»  con  un  poco  de  perejil,  se  sir- 
ven. 

414.  Seso*  álamaitre  d' hotel — So  hacen  hervir  ligera- 
mente y  después  de  dejarlos  enfriar  ae  cortan  en  tres  peda- 
zos y  se  cuecen  con  harina  y  manteca  durante  media  hora, 
aderezada  la  salsa  con  sal  y  pimienta.  Ya  cocidos  se  ponen 
en  un  platón.  Se  derrite  separadamente  mantequilla  con  ha- 
rina, yerbas  picadas,  sal  y  bastante  pimienta.  Se  le  añade 
luego  vinagre  6  zumo  de  limón  bien  incorporado  y  se  bañan 
con  esta  salsa  los  sesos  al  servirlos. 

416.  Entresijo  de  ternera  á  la  vinagreta. — Se  pasa  la  pul- 
pa por  agua  hirviendo,  después  de  salarla  ligeramente  y  en- 
friarla después  enagua  fresca.  Luego  se  cuece  con  sal,  pimien- 
ta y  unas  cuantas  cebollas,  algunos  clavos  de  especias  y  un 
vaso  de  vinagre.  Debe  cocer  perfectamente,  es  decir,  unas 
tres  horas.  Se  sirve  hirviendo,  al  sacarla  de  la  olla  con  sal- 
sa de  ravigote  (núm.  165.)  Al  servir  este  guisado  se  ponen 
en  la  mesa  las  vinagreras,  la  mostacera  y  yerbas  finas  muy 
picadas  para  que  cada  cual  arregle  la  salsa  a  su  gusto. 

416.  Entresijo  con  cebolla*. — Se  pasan  por  la  manteca  cin- 
co ó*  seis  cebollas  grandes  cortadas  en  pedazos  hasta  que  to- 
men buen  color  rubio.  Se  mete  en  la  cazuela  el  entresijo 
cortado  en  pedazos  y  se  revuelve  durante  algunos  minutos 
evitando  que  la  manteca  se  endurezca  demasiado.  Se  le  aña- 
de un  pedazo  de  harina,  una  taza  de  caldo  desengrasado  y 
una  cucharada  de  vinagre.  Se  ha  de  servir  muy  caliente. 

417.  Entresijo  marinado  y  ^fto.—Se  prepara  una  ma- 


101 

rínada  oon  caldo  frío  y  desengrasado  y  otro  tanto  de  vina- 
gre, añadiéndolo  sal,  pimienta  y  yerbas  finas.  Bien  cocido 
el  entresijo,  se  doja  enfriar  y  se  pone  en  remojo  en  la  ma- 
rinada durante  una  hora.  Luego  se  escurre  bien  y  se  echa 
en  la  fritura.  Los  pedazos  han  de  ser  del  grueso  do  un  de* 
do  y  se  sirven  rodeados  de  perejil. 

418.  Meollo*  de  ternera. — Se  designa  bajo  este  nombre 
la  médula  especial  de  la  ternera.  Después  de  hervirlos  li- 
geramente, se  echan  en  agua  fresca  á  que  se  enfrien.  Pue- 
den guisarse  del  mismo  modo  que  los  sesos  aplicándoles  los 

mismos  guisos. 

419.  Lomo  flamenco.  —Se  mecha  el  lomo  con  gruesas 

tiras  de  jamón.  Se  adereza  después  con  sal  y  pimienta,  y 
se  fríe  con  mantequilla.  Se  vuelve  para  que  tome  color  por 
ambos  lados  y  se  pone  á  dos  fuegos  en  una  olla  durante  dos 
ó  tres  horas.  Aparte  se  cuecen  zanahorias  y  col  con  caldo. 
Guando  la  carne  está  cocida,  se  pone  en  un  platón,  alter- 
nando al  rededor  los  pedazos  de  zanahoria  con  los  pedazos 
de  col.  A  la  salsa  que  queda  en  la  olla  se  le  echa  una  taza 
de  caldo  y  una  copa  de  vino  blanco,  se  deja  hervir  un  mo- 
mento y  luego  se  roda  con  ella  la  carne  y  las  legumbres  al 
servirse. 

420.  Lomo  á  la  casera. — Se  mecha  con  tocino  la  parte 
mas  espesa  del  lomo,  que  se  extiende  en  un  platón,  echán- 
dole encima  cinco  6  seis  pedazos  de  limón  y  otras  tantas 
rubanadas  de  cebolla  cruda.  Se  rocia  con  aceite  abundan- 
te para  que  se  impregne  bien  la  carne  y  reboce  al  rededor 
de  la  carne.  Se  polvorea  con  sal  y  pimienta,  y  al  cabo  de 
un  cuarto  de  hora  se  vuelve  la  carne  para  que  se.  empape 
por  ambos  lados,  y  se  vuelve  á  aderezar.     Se  saca  la  carne 


132 

de  1a  marinada  y  w  envuelve  en  un  papel  untado  de  man- 
teca y  atado  oon  un  hilo  fuertemente,  y  se  pone  á  cocer  en 
la  cazuela  con  el  resto  de  la  marinada.  Cuando  la  carne  es- 
tá casi  delatado  cocida,  se  quita  el  envoltorio  de  papel.  La 
cocciou  se  concluye  á  fuego  lento.  Se  retira  la  carne  cuan- 
do está  enteramente  cocida.  Se  añade  á  la  cazuela  media 
taza  de  caldo  ó  de  agua,  media  copa  de  vino  blanco,  unas 
zanahorias  y  unas  cebollas.  Al  servir  se  vierte  esta  salsa 
sobre  el  lomo  con  el  zumo  de  un  limón. 

421.  Orejas  de  ternera/ritas.  — Córtense  á  lo  largo,  en  cua- 
tro pedazos,  orejas  preparadas  y  cocidas.  Pónganse  en  ado- 
bo con  vinagre,  sal  y  pimienta  en  grano;  rebócense  en  ma- 
sa clara  y  f ríanse;  extendiéndolas  prontamente  en  la  sartén 
y  dándolas  vueltas;  se  escurren  para  servirlas  cubiertas  de 
perejil  frito.  ^ 

422.  Orejas  de  ternera  á  la  italiana.  — Después  de  limpias 
y  pasadas  por  la  llama  se  escaldan  y  se  ponen  en  agua  fría; 
cuezanse  en  agua  ó  en  una  cacerola  cubierta  de  rebanadas 
de  tocino,  con  perejil,  cebollas  y  algunas  rajas  de  limón, 
échese  caldo  de  sustancias  y  buen  vino  blanco,  cúbranse  las 
orejas  oon  otras  lonjas  de  tocino,  y  por  encima  con  papel 
engrasado;  al  cabo  de  hora  y  media  estarán  cosidas:  se  sacan 
y  escurren,  se  sacan  y  se  atan  las  puntas  como  si  fuesen  ce- 
bollas; sírvanse  con  una  salsa  italiana. 

423.  Cabeza  de  ternera  en  salpican. — Escáldese  para  qui- 
tarla el  vello,  póngase  en  agua  fría  para  que  suelte  toda  la 
porquería,  por  espacio  de  veinticuatro  horas,  quítense  los 
huesos  de  la  mandíbula  inferior  y  el  extremo  del  hocicó,  no 
dejando  mas  hueso  que.  el  cráneo.  Frótese  oon  limón  y  há- 
gase cocer,  envuelta  en  un  paño,  en  agua  sazonada  con  sal 


ías 

y  pimienta,  un  manojo  de  perejil  y  yerbas,  cebollas,  zanaho- 
rias, miga  de  pan  y  un  puñado  de  harina.  Cuando  este*  co- 
cida ae  saca,  so  deja  escurrir;  se  quitan  con  cuidado  los  hue- 
sos del  cráneo;  se  descubren  los  sesos,  y  se  sirve  guarneci- 
da de  perejil  y  cebollas  picadas.  Cada  uno  la  sazona  en  su 
plato  y  ásu  gusto,  con  sal,  pimienta,  aceite  y  vinagre. 

424  Cabeza  de  ternera  á  la  gallineta.  — Prepárese  y  cue- 
zase como  la  precedente.  Hágase  una  gallineta,  en  la  que 
se  echan  los  pedazos  de  cabeza  antes  de  ligarla;  hágase  her- 
vir lentamente  un  instante,  ligúese  con  yemas  de  huevo  sin 
dejarlo  cocer,  y  sírvase  con  zumo  de  limón. 

425.  Molleja  de  temeía, — Se  lava  en  varias  aguas  y  se 
deja  escaldar  un  cuarto  de  hora  en  agua  hirviendo;  después 
se  puede  emplear  en  los  guisos  que  se  crea  oportuno. 

426.  Molleja  de  ternera  mechada. — Méchese  con  tiritas  de 
tocino  la  molleja  después  de  preparada  como  queda  dicho, 
cuezase  en  el  horno  con  una  buena  reducción  por  espacio 
de  tres  cuartos  de  hora,  báñese  de  un  buen  color  y  pónga- 
se sobre  acederas,  ó  en  una  salsa  de  jitomate. 

427.  Molleja  de  ternera  con  yerbaí  fina». — Piqúese  muy 
menudo  perejil,  ajos  y  chiles  verdes,  amásese  el  todo  con 
un  pedazo  de  manteca,  sal  fina  y  pimienta  en  grano;  pón- 
gase con  la  molleja  en  una  cacerola  con  algunas  lonjas  de 
tocino  por  encima,  medio  vaso  de  vino  blanco  y  otro  tonto 
de  caldo  de  sustancias;  cuezase  á  fuego  lento  para  que  hier- 
van despacio;  cuando  estén  bien  cocidas  se  espuma  la  salsa, 
ae  añade  un  poco  de  caldo  colado  clarificado,  y  con  ella  se 
riega  la  molleja. 

428.  Mollejas  de  tejera.— Después  de  limpias  se  escal- 


134 

dan  y  mechan  con  tocino,  te  meten  en  el  horno  media  hora 
y  ae  rebozan,  sirviéndola*  sobrejechugas  ó*  ooederas. 

429.  Pecho  de  ternera  con  chícharo*. — Córtete  en  peque- 
ños pedazos,  que  se  rehogan  con  manteca,  espolvoreándolos 
de  harina,  sal  y  pimienta;  se  moja  con  un  buen  vaso  de  cal- 
do, añadiendo  perejil,  y  se  deja  cocer  una  hora,  en  seguida 
se  echan  los.chícharos,  y  cuando  todo  esté*  bien  cocido  se 

espuma  la  salsa  y  se  sirve. 

430.  Ternera  aprmtada. — Se  parten  pulpas  de  carne,  se 

embarran  de  naranja  y  sal  blanca  y  se  dejan  así  tres  días, 
'Vspties  se  bañan  bien  de  vinagre  y  se  dejan  otros  tres  dias 
poniéndolas  á  escurrir.  Ta  secas  se  aprensan  y  se  dejan  otros 
tres  ó}ias,  se  embarra  una  cazuela  de  manteca  y  se  echa  allí 
la  carne  con  vino,  vinagre,  hojas  de  aguacate,  cogollos  de 
romero,  hojas  de  naranja,  laurel  de  China,  ajos,  clavo, 
canela,  pimienta,  a  jengibre,  mejorana,  tomillo,  toronjil, 
itlmnradtiz,  salvia,  aceitunas,  jamón  y  chorizos.  Se  tapa 
la  olí»  muy  bien  y  se  pone  á  cocer.  Ya  que  está  la  carne 
cocida  se  aaca  la  olla  al  aire  libre,  se  aica  la  carne,  se  ha- 
cen rebanadas  delgadas  y  se  ponen  en  un  platón.  Enci- 
ma se  les  echa  para  servirlas,  cebolla,  orégano,  tomillo, 
aceitunas,  vinagre,  aceite  y  chiles  en  vinagre. 

431.  Ternera  fin  a  — Se  toma  una  pulpa  de  doce  libras. 
Se  mezcla  media  libra  de  sal  de  ganado  y  una  de  sal,  se 
muelen  juntas,  se  embarra  bien  la  carne  ¡y  con  una  uquja 
de  lardear  se  pica  la  carne  y  se  le  introduce  sal  en  todas  las 
incisiones  hechas.  En  una  cazuela  honda  se  pone  la  carne 
con  una  botella  de  vinagre  de  Castilla,  tomillo,  mejorana, 
bastantes  ajos  pelados  y  enteros,  laurel,  pimienta  gorda  y 
delgada  entera,  clavo,  cebolla  entera,  media  docena  de  li- 


185 

monea  agrios  partidos  por  la  mitad,  y  se  tapa  la  olla  con  un 
liento  para  que  el  aroma  no  se  evapore.  Así  se  deja  por 
espacio  de  nueve  dias,  pero  volteando  la  carne  algunas  ve- 
oes.  A  los  nueve 'dias  se  saca  la  carne  y  se  ponen  unos  pa- 
los en  el  fondo  de  la  olla  y  encima  de  ellos  la  carne  para 
que  no  toque  la  olla,  se  le  echa  agua  y  se  pone  á  cocer.  Ta 
cocida  se  sirve  con  ensalada  6  con  la  salsa  siguiente: 

Se  toman  huevos  cocidos  y  se  pican  muy  menudos;  tam- 
bién se  pica  cebolla  muy  menuda  y  se  revuelve;  se  le  agre- 
ga aceite,  vinagre,  perejil  picado,  mostaza  francesa,  sal  y  pi- 
mienta molida. 

Esta  carne  se  conserva  tres  6  cuatro  meses. 

432.  Ternera  á  la  escarlata. — Se  toma  una  pierna  y  so 
deshuesa,  se  mecha  con  jamón,  se  le  unta  sal  y  especias  en 
gran  cantidad.  Se  pone  en  una  olla  con  tomillo,  alhahaca, 
laurel,  clavo,  ajo  picado,  rebanadas  de  cebolla  y  se  tapa 
bien  con  un  lienzo  para  que  no  penetre  el  aire.  Al  cabo  de 
tres  6  cuatro  dias  se  voltea  y  se  deja  otro  tanto  tiempo  bien 
tapada.  Después  se  saca,  se  et  vuelve  en  un  lienzo  que  se 
cose  para  ponerla  después  á  cocer  en  agua,  echando  cebollas 
y  un  ramillete  de  yerbas  aromáticas.  Se  puede  servir  ca- 
liente con  salsa  española. 

433.  Otra  ternem  aprensada.  —Se  mecha  la  ternera  con 
zanahorias,  ajos,  jamón,  clavo  y  pimienta,  y  se  pone  á  co- 
cer con  agua,  un  poco  de  vinagre,  ajos  y  un  ramillete  de 
yerbas  do  olor;  ya  que  está  bie»i  cocida  se  baca  y  enrolla  en 
una  servilleta  apretándola  mucho,  y  se  deja  en  prensa  un 
día  entero.  Después  se  rebana,  se  echa  en  aceite  y  vinagre 
del  cual  se  pondrá  como  una  cuarta  parte  con  tomillo  y  me- 
jorana todo  molido,  bastantes  hojas  de  laurel,  abundante 


130 

orégano  de  Castilla,  ajos  fritos  en  aceite  y  zanahorias  coci- 
das. Todo  esto  con  la  sal  correspondiente  se  echa  en  una 
olla  que  esté*  curada  pero  que  no  tenga  manteca,  se  tapa  con 
una  servilleta  y  sobre  ella  un  plato  boca  abajo.  En  este  es- 
tado se  pone  la  olla  al  aire  libre  durante  ocho  días,  pasado* 
los  cuales  puede  comerse. 

434.  Ternera  mechada.- — La  mejor  carne  es  la  de  pierna, 
la  cual  se  mecha  con  tiras  de  tocino  que  penetren  bien,  se 
rehoga  en  manteca  con  sal;  échese  después  un  poco  de  ha- 
rina, pimienta,  ajo,  perejil  y  se  deja  cocer  dosjlioras;  tam- 
bién se  le  echan,  si  se  quiere,  acederas,  que  deben  ponerse 
aparte  á  cocer  con  sal  y  manteca,  y  un  poco  antes  de  ser- 
virla se  echan  las  acederas. 

435.  Ternera  al  asador  con  yerbas  unas. — Escójase  un 
buen  trozo;  méchese  con  tocino  sazonándolo  con  sal,  pi- 
mienta y  yerbas  finas,  y  se  pone  en  un  platón,  en  donde  so 
mantendrán  dos  horas  en  adobo,  con  perejil,  tomillo  menu- 
damente picado,  pimienta  y  un  poco  de  aceite;  cuando  ha- 
ya tomado  el  gusto  se  pone  en  el  asador,  echando  por  enci- 
ma todo  el  condimento,  envolviéndolo  bien  con  dos  hojas 
de  papel  blanco  untado  en  manteca,  y  déjese  asar  lenta-  é 
meute  á  poco  fuego;  después  se  quita  el  papel  y  se  levan- 
tan con  un  cuchillo  todas  las  yerbecitas  que  han  quedado 
pegadas  entre  el  papel  y  la  carne,  las  cuales  se  deben  poner 
en  una  cazuela  con  un  poco  de  su  misma  grasa,  un  chorrito 
de  vinagre,  un  poco  de  manteca  y  harina,  sal  y  pimienta; 
se  deja  trabar  todo  para  servirlo  debajo  del  trozo  asado  co- 
mo salsa. 

436.  Lomos  d  la  alemana. — Se  rebanan  en  tajadas  un  po- 
co gruesas,  se  mechan  con  tiras  de  jamón  gordas  y  después 


137 

de  echarles  pimienta  molida,  sal  y  harina,  se  fríen  en  man- 
tequilla y  se  dejan  cocer  por  espacio  de  un  cuarto  de  hora, 
en  agua  que  se  le  echará  poco  á  poco;  cuando  esté  la  salsa 
espesita  se  aparta  y  se  sirve  con  aceitunas  y  alcaparras. 

437.  Lomo*  «prensado*. — Lavados  y  escurridos  los  lomos, 
so  dejan  á  Id  ancho  sin  que  las.  cortaduras^penetren  hasta  el 
otro  lado,  y  bien  untados  de  sal  en  polvo,  pimienta  y  ajo 
machacado,  se  cubren  las  cisuras  con  perejil  picado,  y¿  se 
Acomoda  la  carne  en  una  cazuela  honda  con  las  sajadas  ha- 
cia arriba;  se  cubre  con  vinagre  fuerte,  laurel,  tomillo  y  me- 
jorana, y  se  deja  cuatro  días  en  infusión  dejando  la  cazue- 
la bien  tapada.  Pasados  los  cuatro  dias  se  echa  agua  á  que 
se  cueza,  y  en  cuanto  el  caldo  se  consumid,  se  apea  la  ca- 
zuela de  la  lumbre,  se  escurre  la  carne  y  se  aprensa  entre 
dos  tablas  después  de  envolverla  en  un  cotense  y  poniendo 
peso  encima.  Al  otro  díasele  echa'aceite,  vinagre,  pimien- 
ta en  polvo,  aceitunas  y  tornachiles. 

433.  Lomo  de  ternera. — Se  toma  un  lomo  de  ternera  y  se 
prepara  con  sal  y  pimienta  molida;  á  las  dos  6  tres  horas  se 
pone  á  dorar  en  manteca  muy  caliente;  cuando  está  ya  do- 
rado se  le  echa  un  poco  de  vino  de  Jerez  y  se  pone  a  cocer 
á  fuego  lento  con  lumbre  por  encima.  Cuando  se  haya  con- 
sumido el  vino  so  le  echa,  un  pocilio  de  agua  caliente  y  se 
tapa  dejándole  la  lumbre  otro  rato.  Después  se  deja  enfriar 
para  comerlo. 

439.  Oiro. — Se  picotea  el  lomo  por  ambos  lados  mechán- 
dolo con  jamón  y  pimienta;  se  muelen  especias  finas  lavan- 
do bien  el  metate  con  vinagre,  se  unta  el  lomo  con  aceite, 
echándole  las  especias  y  dejándolo  un  rato  en  infusión;  se 
pono  después,  en  la  sartén  á  que  se  dore  en  manteca,  luego 


138 

se  le  añade  agua,  una  cabeza  de  ajo  machacada,  gnj«>»  de 
cebolla,  las  especial  molidas  en  que  estuvo  en  infusión,  ho- 
jas de  perejil,  y  todo  se  deja  hasta  que  suelta  el  agua  que- 
dando solo  la  salsita. 

Esta  misma  salsa  sirve  y  muy  bien  para  la  lengua,  agre- 
gándole solamente  chile  ancho. 

440.  Lomo  de  ternera  en  estofado. — Se  ponen  eu  una  ca- 
zuela pedazos  do  tocino,  y  encima  lomo  de  ternera  con  za- 
nahorias, cebollas ,  un  ramillete,  sal,  pimienta  y  un  poco  de 
caldo,  unas  gotas  de  vinagre  y  limón  en  ruedas  sin  corteza 
ni  pepitas;  póngase  á  cocer  con  un  poco  de  fuego  por  enci- 
ma, y  para  servirla  se  desengrasa  y  reduce. 

441.  Lomo  <U  ternera  asado. — Después  de  mecharlo  en  la 
parte  interior,  se  coloca  en  el  asador  á  lo  largo,  cubierto 
con  un  papel  untado  de  manteca,  cuidando  de  humedecerlo 
á  menudo;  cuando  esté  asadp  se  le  quita  el  papel  para  que 
tome  color,  y  se  sirve  con  sustancia. 

442.  Hígado  de  ternera  frito, — Córtese  en  ruedas  y  se  echa 
en  la  sartén  con  perejil,  cebolletas  picadas  y  manteca;  S3 
menea  un  poco,  y  después  se  le  añade  una  cucharada  de  vi- 
nagre ó  vino,  especias,  pimienta  y  sal;  déjese  cocor  un 
cuarto  de  hora  y  sírvase. 

443.  Hígado  de  ternera  en  papel  —Se  corta  en  Ion  jitas  co- 
mo de  un  dedo  y  se  pone  en  adobo  compuesto  de  aceite,  pi- 
mienta, sal  y  yerbas  finas,  tómese  después  papel  recio  y  se 
hacen  unas  cajitas,  que  se  untan  con  manteca,  póngase  den- 
tro una  lonjita  delgada  de  tocino  y  yerbas  finas,  y  encima  la 
tajada  de  hígado,  y  después  yerbas  finas  y  otra  lonjita;  cié- 
rrese la  caja  y  póngase  en  la  parrilla,  dejándolo  asar  hasta 


139 

que  el  papel  se  ponga  muy  dorado,  y  entonce»  se  sirve  in- 
mediatamente. 

444.  Bofe»  de  ternera. — Después  de  bien  limpios  con  agua 
hirviendo,  se  cortan  en  pedazos  pequeños  y  se  ponen  con 
manteca,  empolvados  en  harina,  se  les  menea  mucho,  echán- 
doles en  agua  6  caldo,  se  sazonan  con  tomillo,  ajo,  perejil, 
y  cuando  estén  cocidos  se  les  echa  un  batido  de  huevos  y 
unas  gotas  de  vinagre. 

445.  Guisado  de  higadillos. — Se  les  quita  la  hiél  y  se  es- 
caldan enteros  con  agua  hirviendo;  póngase  en  una  cazuela 
un  poco  de  caldo,  medio  vaso  de  vino  blanco,  perejil,  cebo- 
lletas, un  diente  de  ajo,  pimienta  y  sal;  debe  cocer  un  cuar- 
to de  hora. 

446.  Bofes  i  higadillos  verdes.  — Se  cuecen  los  bofes  é*  higa- 
dillos con  sal  y  manteca,  y  se  pican  después  muy  menuditos. 
Se  rebana  una  cebolla  grande  y  se  fríe  á  que  no  quede  muy 
tostada,  se  sacan  y  se  echan  en  la  manteca  los  bofes  é  higa- 
dillos. Se  muele  bastante  perejil,  pimienta,  clavo,  canela, 
dos  6  tres  chiles  verdes  y  un  pedazo  frito,  se  echa  á  freir 
todo  en  el  caldo  con  dos  ó  tres  yemas  de  huevo  y  un  poco 
de  aceite.     £1  caldo  debe  quedar  entre  espeso  y  aguado. 

447.  Pecho  de  ternera  relleno. — Después  de  separada  la  ex- 
tremidad de  los  huesos  de  los  lados,  se  quita  la  parte  de  en- 
cima y  la  de  debajo,  introduciendo  en  este  hueco  el  relleno 
cocido;  volviendo  á  cocer  las  carnes,  se  ponen  en  una  cazue- 
la con  lonjas  de  tocino,  y  el  pecho  hacia  arriba,  cubierto  con 
otras  lonjas;  pueden  añadirse  cebollas,  zanahoria*,,  un  ra- 
millete, sal  y  pimienta,  mitad  de  caldo  y  vino  blanco;  cú- 
brase la  cazuela  con  fuego,  y  déjesele  cocer;  en  estando  se 
le  añade  un  poco  de  caldo  y  zumo  de  limón. 


140 

448.  Sartenada,  guiso  de  carne.  — Tómente  despojos  de 
ternera  y  un  poco  de  tocino,  córtese  todo  en  trocitos  como 
dados,  fríase  una  cebolla  y  un  diente  de  ajo;  cuando  se  ha 
reblandecido  un  poco  se  añade  caldo  ó  agua,  añadiéndole 
laurel,  ajos  y  especias;  y  después  pueden  echarse  algunos  des- 
pojos de  aves  caseras. 

449.  Albóndigas  de.  te-mercu  — Se  muele  media  libra  de  ter- 
nera y  media  de  carne  de  puerco  con  pimienta  y  sal.  Se 
pica  jitomate,  cebolla  y  ajo  muy  roenudito  y  se  fríe  bien  en 
manteca.  Cuezanse  aparte  unas  papas  y  chorizos,  y  esto  se 
sancocha  en  el  recaudo,  añádase  unas  alcaparras,  un  huevo 
cocido  y  un  poco  de  porejil.  Con  la  carne  que  ya  está  mo- 
lida se  hacen  albóndigas  en  las  cuales  se  echa  un  poco  de 
picadillo;  f ríanse  después  en  manteca.  Hágase  luego  una 
salsa  con  media  cabeza  de  ajos  fritos,  tres  jitomates  gran- 
des asados  y  molidos,  y  unas  alcaparras.  Se  muele  todo  sin 
quitarle  los  prietitos  al  jitomate  y  se  fríe  bien  en  manteca. 
Ya  que  está  se  le  echa  el  agua  y  luego  las  albóndigas,  y  se 
deja  cocer. 

450.  Otras  albóndigas. — Se  pica  un  poco  de  lomo  de  ter- 
nera, se  muele  con  unos  gajos  de  cebolla,  unos  dientes  de 
ajo,  especias  finas  y  un  poco  de  pan  remojado;  se  le  agrega 
vinagre,  poca  cantidad,  manteca  y  un  huevo;  se  revuelve 
bien  y  se  hacen  las  albóndigas  echándolas  en  la  salsa  si- 
guiente: se  pica  cebolla  menudita,  se  fríe  en  manteca  y  acei- 
te: se  muelen  unos  dos  jitomates  con  especias  finas  y  un  pe- 
dazo de  pan  frito;  huevos  cocidos  con  todo  y  clara,  se  incor- 
poran con  la  cebolla  y  así  que  está  todo  frito  se  van  echan- 
do las  albóndigas  á  que  se  cuezan,  pero  sin  echarles  agua, 


141 

lino  que  se  tapa  y  se  les  añade  unas"  alcaparras  con  un  po- 
co de  vinagre. 

Lo  mismo  puede  hacerse  con  los  pollos,  con  la  diferencia 
de  que  estos  se  ponen  en  crudo  y  después  se  los  echa  la  sal- 
sa para  que  cuezan. 

451.  Albóndigas  de  ternera. — Se  pican  y  muelen  pulpas 
de  ternera  con  sal  y  poca  pimienta.  Estando  ya  molido  se 
hace  en  el  mismo  metate  una  tortilla  gorda  y  se  le  ponen 
tiras  de  jamón  y  pimientas  enteras,  y  se  enrolla  á  modo  de 
chorizon.  Se  pone  á  cocer  en  una  tortera  con  agua,  vinagre 
y  vino  de  Jerez,  laurel,  tomillo,  orégano,  mejorana  y  unos 
ajos  enteros,  cuidando  que  no  se  pegue.  Ya  que  está  coci- 
da la  carne  se  deja  enfriar,  se  rebana  y  se  aliña  con  aceite 
y  vinagre,  6  se  le  hace  una  salsa  de  jitomates  cocidos  con 
cebollas  tiernas  enteras  y  ajo  molido,  todo  lo  cual  se  fríe. 

452.  Leñgna. — Se  fríen  alcaparras,  se  asan  unos  jitoma- 
tes, se  dora  en  manteca,  se  muele  todo  y  frie  en  manteca 
y  aceite:  échensele  después  especias  finas  molidas.  Estan- 
do ya  de  sazón  esta  salsa  échesele  la  lengua  cocida  y  en  re- 
banadas y  déjese  reposar. 

453.  Lengua. — Se  echa  á  cocer  en  una  olla,  se  pica  bas- 
tante cebolla,  ajo  y  un  poco  de  perejil;  se  echa  manteca  en 
una  cazuela  y  allí  s i  echa  todo  esto  con  unas  rebanadas  do 
jamón.  Ya  que  está  frito  se  le  echa  la  lengua  partida  en  re- 
banadas. Se  deja  freir  otro  poco  y  se  le  echa  el  mismo  cal- 
do eu  que  hirvió  la  lengua;  se  muele  clavo,  canela  y  pimien- 
ta, unas  rebanadas  de  pan  frito  y  un  poco  de  tomillo.  Para 
llevarse  á  la  mesa  se  le  echa  aceite,  chiles,  aceitunas  y  al- 
caparras. 

454.  Lengua  de  Urt*era. — Se  cuece  la  ternera  con  la  sal 


142 

correspondiente,  se  pica  bastante  jitomate,  cebolla  y  ajo,  y 
se  pone  á  freír  con  bastante  manteca  en  una  cazuela  en  la 
que  se  ponen  unas  rebanadas  de  jamón  y  unos  chorizos;  una 
vez  bien  frito  se  rebana  la  lengua  y  se  echa  en  la  cazuela, 
agregándole  un  poco  del  caldo  en  que  se  coció  la  lengua,  un 
poco  de  perejil,  orégano  y  tomillo,  después  clavo,  canela  y 
pimienta,  todo  molido.  El  caldillo  ha  de  quedar  espeso  y  se 
adorna  con  chiles  y  aceitunas. 

455.  Otra. — Se  clavetea  la  lengua  con  jamón,  ajos,  pi- 
mienta y  clavo;  se  echa  en  una  olla  con  bastante  cebolla  re- 
banada y  pedazos  de  zanahoria,  tomillo,  orégano  y  laurel; 
se  fríe  en  manteca  y  ya  que  está  se  le  agrega  vinagre  de 
Castilla,  otro  tanto  de  vino  carlon  y  agua  en  poca  cantidad; 
se  muele  clavo,  canela  y  pimienta  con  rebanadas  de  pan  fri- 
to en  manteca  se  tapa  bien  la  olla  para  que  cueza  la  carne, 
y  ya  que  está  cocida  se  sirve  de  dos  modos:  6  se  echa  ente- 
ra en  el  platón  ó  se  corta  en  rebanadas.  De  ambos  mudos 
se  adorna  con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

356.  Otiv  de  lengua. — Se  cuece  desde  la  víspera,  al  dia 
siguiente  se  hace  el  caldillo  con  bastante  manteca;  se  fríen 
dos  manojos  de  cebolla  con  un  poco  de  ajo  picado;  ya  que 
está  frito  se  le  echan  ocho  jitomates  molidos,  pimienta,  cla- 
vo y  un  pedazo  de  pan  frito  y  molido,  bastante  perejil  picado 
y  medió  cuartillo  de  vino  Jerez.  Se  echa  la  lengua  en  reba- 
nadas y  se  aparta  así  que  está  espeso  el  caldillo. 

457.  Ríñones. — Se  ponen  á  hervir  los  ríñones  y  ya  que 
hirvieron  un  rato  se  tira  el  agua  y  se  les  echa  otra  caliente, 
se  dejan  cocer  y  se  rebanan.  Frianse  rebanadas  de  pan  y 
muélanse  con  tres  clavos,  tres  pimientas  y  un  poco  de  cañe- 


143 

la;  f ríase  en  manteca;  échese  agua  al  frito  y  luego  los  ríño- 
nes, sal  y  vinagre,  y  déjese  cocer. 

458.  Otros. — Se  cuecen  como  los  anteriores  y  se  rebanan. 
Se  asan  unos  jitomates,  se  muelen  con  clavo,  canela  y  pi- 
mienta, se  fríe  esto  en  manteca  y  aceite  y  se  agrega  vinagre. 
Se  dejan  sazonar  procurando  que  la  salsa  quede  espesa.  Se 
adornan  con  pan  frito. 

459.  Otras  ríñones. — Se  parten  los  riñónos  en  pedazos,  se 
les  da  un  baño  de  sal  y  limón,  y  se  les  deja  asi  un  rato;  lue- 
go se  pica  cebolla  y  ajo  moñudos,  se  fríe  en  manteca  sin  do- 
rar y  se  echan  luego  los  ríñones;  se  agrega  al  fiito  un  poco 
de  harina  á  que  dore  con  el  recaudo,  y  se  tapa  para  que  cue- 
zan los  ríñones  sin  echarles  agua;  después  que  han  hervido 
se  les'agrega  medio  vaso  de*  vino  carlon,  otro  tanto  de  vino 
de  Jerez,  perejil  picado  y  un  poquito  de  vinagre.  Echado 
todo  esto  se  vuelven  á  tapar  y  se  dejan  cocer. 

460.  Otros. — Después  de  quitarles  el  sebo  y  el  pellejo  que 
les  cubre  se  pican  y  frien  en  manteca  y  mantequilla,  ae  pica 
perejil,  jitomate,  ajo  y  cebolla;  se  fríe  esto  recaudo  aparte; 
ya  que  los  ríñones  están  bien  fritos  se  mezclan  con  el  recau- 
do en  una' olla,  cuando  están  ya'cocidos  se  les  agrega  clavo» 
canela,  un  pedazo  de  pan  frito,  alcaparras,  un  chile  ancho  y 
ajo,  todo  molido  con  un  buen  trozo  de  mantequilla  y  poco 
antos  deservirse  se  añade  medio  vaso  de  vino  de  Jerez. 


ASADOS. 

461.     Modo  de  preparar  la  carne  para  asados. — Antes  de 
cocerla  carne  debe  picotearse  bien  con  un  trinche;  se  le 


144 

esprime  zumo  de  limón  7  á  falta  de  éste,  vinagre,  te  pone 
á  remojar  por  un  buen  rato  y  después  se  les  echa  aceito, 
manteca  y  sal.  Con  solo  esto  queda  muy  propia  para  el  rost- 
beef  poniéndole  lumbre  encima,  aunque  queda  mejor  me- 
tida en  el  horno,  Sun  muy  propias  para  los  asados  las  salsas 
siguientes: 

462.  De  alcaparrón.  — Para  dos  libras  de  carne,  se  muele 
cuartilla  de  alcaparras,  seis  dientes  de  ajo  y  la  cuarta  parte 
de  pan  frito  remojado,  esto  se  echa  al  caldo  preparado  como 
dijimos;  á  medio  cocer  y  cuando  todo  está  junto  se  deja  sa- 
zonar quedando  la  salsa  espesa. 

463.  De  jitomate. — Para  la  misma  cantidad  que  la  ante- 
rior y  preparada  del  mismo  modo,  se  muele  un  jitomate  re- 
gular, una  cebolla  en  crudo  y  seis  dientes  de  ajo;  molido  to- 
do se  echa'á  la  carne  á  medio  cocer  y  se  deja  sazonar. 

464.  De  especia*  y  vino  tinto  — Preparada  la  carne  como 
se  ha  dicho  antes,  se  muelen  seis  pimientas,  cuatro  clavos, 
una  rajita  de  canela^y  con  una  cabeza  de  ajo  pelada  y  solo 
machacada  se  echa  al  asado  á  medio  cocer,  con  medio  poci- 
lio de  vino  tinto  y  una  cebolla  partida  en  ocho  pedazos,  un 
poco  de  vinagre  y  se  deja  sazonar. 

466.  De  chile  ancho. — Bajo  el  mismo  método  que  se  ha  ex- 
presado se  prepara  el  asado  y  molido  el  chile  ancho  con  es- 
pecias jr  un  poco* de  vinagre,  ae.deja'sazonar  y  espesar.  To- 
dos estos  asados  se  sirven  con  ensalada  6  papas  cocidas. 

466.  Asado  de  rostbeef. — Se  coje  carne  para  rostbeef  que 
es  una  especie  de  costilla  grande,  y  sin  lavarla  se  pone  á 
freir  en  bastante  manteca  con.una'cabeza  de  ajo,  dos  cebo- 
llas entenu,]un/amillete"dewpeiejil,'con"cIavo,  canela,  pi- 
mienta, tomillo,  laurel'y  mejorana;  amarrado  todo  con  una 


1U 

pita.  Se  deja  freír  hasta  que  está  •amaínente  dorado  y  des- 
pués se  le  echa  caldo  del  puchero  (antes  de  echarle  las  es- 
pecias) y  un  jitomate  partido  en  cuatro  y  eepriurído;  se  cal- 
cula la  cantidad  de  caldo  suficiente  para  que  cueca  sin  te- 
nerle que  añadir  agua. 

467.  Atado  de  lomo  de  p^ureo  relleno. — Se  abre  un  lomo 
de  puerco  procurando  que  no  llegue  la  cortada  al  otro  lado, 
de  modo  que  forme  como  bolsa.  Este  se  rellena  con  carne 
6  con  acelgas  y  papas.  Si  se  rellena  con  carne,  es  haciendo 
un  picadillo  como  para  chiles  y  en  crudo;  si  se  rellena  con 
acelgas,  se  cuecen  antes  y  se  pican  con  papas  también  coci- 
das, se  fríe  recaudo  de  jitomate,  cebolla  y  ajo,  todo  picado, 
y  allí  se  echan  las  acelgas  y  las  papas.  Después  de  relleno 
se'cose  la  boca  y  se  pone  al  fuego  con  el  caldillo  que  se  di- 
jo, ó*  con  uno  de  jitomates  que  se  dispone  asando  jitomates 
que  se  muelen  con  especias,  se  echan  al  asado  con  un  poco 
de  vinagre  dejándolo  sazonar.  Se  sirve  con  ensalada  y  pa- 
pas fritas. 

468.  Avado  de  costillas  de  ternera, — Se  ponen  á  freír  en 
una  cazuela  con  bastante  manteca,  sal,  pimienta  y  unos  ra- 
bos de  cebolla,  se  deja  refreír  hasta  que  tomen  color  de 
asado  y  entonces  se  echa  el  agua  suficiente  para  que  se  cue- 
za. Se  tapa  la  cazuela  y  se  deja  6  fuego  manso.  Ya  que  le 
falta  poco  á  la  carne  para  estar  cocida  se  le  agregan  papas 
para  que  se  cuezan. 

Ha  de  quedar  muy  poca  salsa. 

469.  Asado  de  ternera,  -Se  toman  pulpas  de  ternera  y  se 
frotan  con  sal,  pimienta  y  limen.  Se  pone  á  calentar  un 
poco  de  manteca  y  se  dora  la  carne  un  poco;  se  tapa  perfec- 
tamente sin  echarle  agua,  se  cuida  de  voltear  la  carne  con 

t*  OOCIYnA  rOBLAJTA.— tojl  l— 10. 


146 

frecuencia  y  de  escurrir  el  sudor  de  U  tapadera  hasta  qne 
esté*  la  carne  blanda.  Si  se  ve  que  se  ha  consumido  la  sal- 
sa á  la  hora  de  llevarla  á  la  mesa  se  le  echa  un  poco  de  agua 
caliente  y  se  pone  un  momento  en  la  lumbre  para  que  le 
quede  una  salsita  oscura.  Se  le  ponen  unas  rebanadas  de 
pan  frito. 

470..  Atado  blanco. — Se  pone  la  carne  cruda  en  la  cazue- 
la con  bastante  agua,  vinagre,  jamón,  tomillo  molido,  co- 
mino, clavo  y  unas  cabezas  de  ajo.  Se  pone  al  fuego,  se  le 
echa  manteca  y  se  deja  hervir  hasta  que  consuma  el  agua, 
poniéndolo  entre  dos  fuegos. 

471*  Atado  de  tuétano. — Se  rebana  y  aplana  un  filete  do 
ternera;  á  cada  libra  de  carne  se  le  echa  cuartilla  de  tuéta- 
no de  vaca,  se  rebana  también  y  se  pone  en  el  fondo  de  la 
olla  y  encima  la  ternera  y  sal.  Se  pone  la  olla  sin  echarle 
nada  de  agua:  cuando  le  falta  poco  á  la  carne  para  estar  se 
le  agregan  unas  papas  chicas  para  que  cuezan  y  no  se  deja 
secar. 

472.  Atado  de  pierna  de  carntro. — Se  mecha  la  pulpa  de 
carnero  con  tiras  de  jamón,  se  deja  desde  la  víspera  en  in- 
fusión de  agua  6  de  vinagre.  A  otro  dia  se  echa  manteca 
en  una  cazuela,  se  sancocha  y  se  le  echa  agua  y  un  jitoma- 
te picado,  clavo,  canela  y  pimienta,  se  machaca  una  cabeza 
de  ajos,  y  se  echa  en  la  cazuela  en  que  ha  de  hervir  la  car- 
ne, se  deja  consumir  á  que  solo  quede  una  salsa  en  ln  que 
se  pone  la  carne  para  que  sé  fría.  Se  adorna  oon  papas  frías 
enteras  6  rebanadas,  que  se  dejarán  cocer  en  el  mismo1  caldo. 

473.  Otro  de  perejil. — Se  clavetea  la  carne  con  ajos  y  gra- 
nos de  sal,  se  echa  en  una  olla  con  trozos  de  cebolla,  mu- 
cho perejil  picado,  una  cucharada  de  manteca  y  un  poco  de 


147 

vinagre.  Se  tapa  la  olla  y  te  pone  á  cocer.  Ha  de  quedar 
la  salsa  espesa.  Se  adorna  con  muchas  alcaparras  y  cebolla 
rebanada. 

474.  Otro. — Se  toma  ternera  macisa  y  se  clavetea  con  pe- 
dacitos  de  ajo  y  jamón.  Se  dora  la  carne  en  manteca.  Ta 
que  está  se  le  eeha  agua,  laurel,  tomillo,  clavo,  canela,  pi- 
mienta y  yerbas  sueltas,  unas  rebanadas  de  jitomate,  una 
cabeza  de  cebolla  y  un  poco  de  vinagi¿.  Se  deja  cocer  6 
buen  fuego  procurando  que  quede -con  alguna  salsa. 

475.  Asado  de  ternera. — Se  toma  un  trozo  de  ternera  ma- 
ciza, se  pone  en  infusión  de  vinagre  6  zumo  de  limón,  se 
tiene  así  por  un  rato:  después  se  sancocha  en  manteca,  ya 
que  se  doró  se  le  echa  agua  y  sal,  alcaparras,  dientes  de  ajo, 
un  pedazo  de  pan  remojado  en  vinagre,  todo  molido  se 
echa  á  la  carne  y  se  pone  al  fuego  hasta  que  se  seque. 

476.  Ternera  asada  con  yerba»  finas. — Se  prepara  una 
marinada  con  un  buen  puñado  de  perejil  y  una  ó*  dos  cebo* 
Has  bien  picadas  y  desleídas  con  unas  cuantas  cucharadas 
de  buen  aceite,  y  sazonadas  con  sal  y  pimienta.  Se  remoja 
la  ternera  en  una  marinada,  por  todas  sus  caras,  de  modo 
que  al  ponerla  en  el  asador  haya  absorvido  todo  el  aceite. 
Se  extienden  las  yerbas  finas  por  toda  la  superficie  del  pe- 
dazo de  ternera  y  se  contienen  por  medio  de  un  papel  en- 
grasado y  atado  con  un  hilo  para  que  las  yerbas  no  se  cai- 
gan. Cuando  el  asado  asta  casi  cocido,  de  modo  que  solo  le 
falta  tomar  color,  se  retira  el  papel  con  precaución  y  se  qui- 
tan con  un  cuchillo  las  yerbas  adheridas  al  papel  ó  i  la  super- 
ficie del  asado.  Se  meten  las  yerbas  en  una  cazuela  con  pro- 
porcionada manteca  y  una  cucharada  de  harina  paira  hacer 
una  requemada  rubia  que  se  moja  con  un  poco  de  caldo  sin 


148 

grasa  y  unas  cuantas  gotas  de  vinagre.  Se  sirve  esta  salsa  en 
una  salsera  al  mismo  tiempo  que  la  ternera  atada  con  yer- 
bas finas. 

477.  Atado  de  pecho  de  camero. — El  modo  mejor  de  pre* 
parar  este  plato  consiste  en  cocerlo  bien  antes  en  el  puche- 
ro. Cuando  está  bastante  cocido,  se  retira  de  la  olla,  se  de- 
ja enfriar,  se  pasa  por  agua  tibia,  y  se  oubre  con  ralladura 
de  pan.  Luego  se  deja  cocer  en  las  parrillas  nada  mas  el 
tiempo  necesario  para  que  tome  color,  se  vuelve  una  6  dos 
veces  y  se  sirve  con  salsa  española.  Puede  servirse  también 
con  toda  clase  de  purés. 

478.  Salazón  de  puerco  par  medio  de  coladura. — Damos 
esta  fórmula  porque  la  creemos  muy  útil  para  las  personas 
que  viven  en  el  campo. 

Se  coloca  en  un  banoo  6  trípode  de  madera,  un  cuezo  6 
artesa  de  madera  también  con  un  agujero  en  su  parte  infe- 
rior, al  que  se  pone  un  canuto  para  que  escurra.  El  fondo 
del  cuezo  se  cubre  con  una  capa  de  sal  en  grano,  tomillo, 
salvia  y  hojas  de  laurel  con  unos  clavos  de  especias  y  unos 
granos  de  pimienta.  Sobre  esta  capa  se  coloca  la  carne  á 
que  la  cubra,  comenzando  por  los  pedazos  mas  grandes.  La 
carne  se  frota  bien  con  sal  molida  por  ambas  partes  y  se  re- 
cubre con  la  sal  mezclada  con  las  plantas  aromáticas,  y  se 
eonoluye  con  una  capa  de  estas  mismas  sustancias,  que  han 
de  cubrir  completamente  los  pedazos  de  carne.  Se  llena  el 
cuezo  con  una  capa  de  sal  y  otra  de  carne;  la  última  capa  ha 
de  ser  de  sal  y  sustancias.  Hecho  esto,  se  vierte  por  enci- 
ma un  litro  ó  dos  de  agua  fría  repartida.  Esta  filtra  al  tra- 
vés de  la  carne,  disuelve  la  sal  y  concluye  por  colarse  en  for- 
ma de  salmuera  por  el  agujero  del  cuezo,  debajo  del  cual  se 


14» 

pon*  un  lebrillo  para  que  la  reciba.  A  medida  que  la  vasi- 
ja se  llena  se  vierte  la  saI  en  el  cuezo.  Esta  operación  tres 
6  cuatro  dias  según  el  grado  de  sal  que  se  quiera  dar  á  la 
carne.  De  este  modo  se  obtiene  casi  inmediatamente  el  efec- 
to útil  de  la  sal  y  de  las  plantas  aromáticas  en  la  carne  de 
puerco,  que  se  conserva  muy  bien  y  tiene  muy  buen  sabor. 

Esta  salazón  tiene  la  ventaja  de  que  se  puede  regular  muy 
fácilmente  el  grado  de  sal  que  se  quiera  dará  los  diferentes 
trozos  de  carne,  de  donde  resulta  que  raramente  hay  nece- 
sidad de  desalarlos,  en  el  momento  de  hacer  uso  de  ellos, 
por  cuanto  no  han  sido  colados  con  exceso. 

479.  Asado  de  lomo  de  ternera. — Se  coje  libra  y  media 
de  lomo  de  ternera,  se  acecina  y  se  pone  á  remojar  en  vina- 
gre y  sal  pimienta  una  hora,  se  pone  una  cazuela  con  man- 
teca bien  caliente,  se  le  va  echando  agua  en  poquitos  has- 
ta que  suelte  el  caldillo,  se  le  echa  jitomate  picado,  cebolla 
rebanana,  unos  dientes  de  ajo  machacado*,  orégano,  tomi. 
lio,  laurel,  pimienta  en  grano,  se  fríe  todo  esto  hasta  que 
quede  seco,  se  le  agrega  una  sa'sa  de  papas. 


PUERCO, 

480.  Solomillos  de  puerco. — Lávense  en  todo  su  largo  y 
máchense  con  tocino  en  tiras  delgadas,  dándoles  una  figura 
redonda.  Pónganse  hojas  de  tocino  en  una  cacerola  con  al- 
gunas rodajas  de  ternera,  zanahorias,  cebollas,  clavo,  un  ra- 
mo de  perejil,  tomillo  y  laurel;  coloqúense  los  solomillos  so* 
bre  este  sazonamiento  y  cúbrase  con  dos  papeles  engrasados; 


150 

añádase  una  cucharada  de  caldo  y  póngase  al  fuego;  al  cabo 
de  una  hora  ae  pone  fuego  sobre  la  tapadera  para  darles  co- 
lor; al  servirlos  se  sacan  del  guiso,  se  ponen  en  el  platón  so- 
bre lechugas  ó  una  salsa  picante  ó  puré. 

4tsl.  Otro  de  solomillo. — Se  pica  bastante  cebolla  muy  me- 
nuda y  un  poco.de  perejil  fresco  y  se  revuelve;  se  corta  la 
carne  en  rebanadas  muy  delgadas,  se  muele  clavo,  canela 
y  pimienta.  Se  abren  unos  agujeros  en  la  carne,  que  se  re- 
llenan de  cebollas  y  perejil  y  unas  rebanad  i  tas  de  jamón,  se 
polvorean  con  especias  los  agujeros  en  que  se  ha  metido  e* 
perejil  y  la  cebolla.  Ya  que  está  todo  dispuesto  se  pone 
manteca  en  una  cazuela  y  se  hace  freír  el  lomo.  Ya  frito  se 
le  echa  jitomate  molido  sin  pepitas,  remoliéndolo  mucho; 
échesele  agua;  ya  que  coció  y  cuando  está  espeso  se  le  agre* 
ga  vino  de  Jerez,  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

482.  Otro  de  solomi/los.— Se  busca  un  lomo  ancho,  se  abre 
de  una  orilla  para  el  oentro  para  que  pueda  extenderse  y  lue- 
go se  apalea  un  poco.  Muélase  clavo,  canela  y  sal,  y  échese 
á  la  carne  que  se  pone  á  cocer.  Cuezanse  zanahorias,  beta- 
bel, jamón  y  huevos  todo  cocido;  córtense  estas  cosas  en  pe- 
dazos, piqúese  perejil  muy  menudo  y  llénese  el  lomo  prime- 
ramente con  una  capa  de  jamón,  otra  de  zanahoria,  otra  de 
betabel  y  otra  de  huevo  con  peréjilacabando  con  el  jamón. 
Puesto  el  relleno  se  enrolla  la  carne  á  que  forme  una  espe- 
cie de  albondigon,  se  ata  fuertemente,  se  sancocha  en  man- 
teca y  una  vez  de  punto  so  le  echa  el  agua  suficiente  para 
que  cueza.     Ya  al  acabarse  de  cocer  se  rocía  de  vinagro. 

483.  Otro  gnisado. — Se  corta  el  lomo  del  tamaño  de  una 
cuarta,  se  pone  en  un  picador  y  se  parte  en  disposición  de 
que  vaya  anchándose  y  no  pasen  las  cortadas  al  otro  lado1 


161 

golpeando  recio  la  carne  para  aplastarla.  Se  rellena  con  ti- 
ran de  jamón  cocido,  pedazos  do  huevo  también  cocido,  pa- 
sa*, almendras,  piñones,  alcaparras,  aceitunas  picadas  y  un 
polvo  de  sal  y  pimienta.  Después  se  enrolla  y  se  amana 
Póngase  en  una  olla  un  poco  cte  agua  con  sal  correspondien- 
te y  cuezase  la  carne;  ya  cocida  se  muele  bastante  jitomate 
sin  pepitas  y  se  fríe  en  una  cajuela  con  cebollas  enteras.  Se 
le  agrega  un  poco  de  caldo  de!  en  que  se  cocieron  los  lomos; 
muélase  clavo,  canela  y  pimionta,  échese  en  los  lomos  y 
cuando  el  caldillo  esté*  espeso,  agregúese  un  poco  de  vino  de 
Jerez. 

484.  Otro  guisado. — Se  pica  bastante  cebolla  muy  menu- 
da y  un  poco  de  perejil,  se  revuelve,  se  cortan  tiras  de  ja- 
món muy  delgadas,  se  remuele  clavo,  canela  y  pimienta; 
se  hacen  al  lomo  unos  agujeros  hondos  con  un  cuchillo  y  se 
rellenan  con  la  cebolla  y  perejil,  se  polvorean  con  las  espe- 
cias las  rebanadas  de  jamón  y  se  ponen  en  los  agujoros-  Ya 
que  está  claveteado  todo  el  lomo  se  echa  manteca  en  una 
cazuela  y  en  ella  el  lomo  á  que  se  fría.  Ya  frito  se  le  agre- 
ga bastante  jitomate  molido  sin  las  pepitas  y  se  deja  refreír; 
póngase  luego  el  agua  y  cuando  esté  la  carne  cocida  y  el  cal- 
do espeso,  rocíese  con  vino  de  Jerez  y  póngasele  aceitunas. 

485.  Lomo  á  la  parrilla,  de  Juitsita. — Se  rebana  el  lomo 
delgado  y  se  aplana  como  para  bifteck,  se  les  echa  un  poco 
de  vinagre  y  sal,  y  se  dejan  así.  Media  hora  antes  de  co- 
mer se  ponen  á  asar  á  la  parrilla  untándoles  una  poquita  de 
manteca  á  fuego  muy  manso,  se  voltea  para  que  doren  de 
los  dos  lados,  y  la  mantequita  que  escurre  se  les  echa  por 
encima  después  de  puestos  en  el  platón.  Al  ponerlos  á  asar 


152 

en  la  parrilla  m  lea  unta  antea  un  poco  de  ajo  molido  con 
tan  tibie  coniiuos. 

480.  Lomo  de  doña  Tertea. — Se  untan  doa  lomos  de  puer- 
co con  Amatante  aal  y  ae  dejan  así  por  doa  dias,  teniendo 
cuidado  de  voltearlo;  pasados  estos  ae  muelen  dos  cabezas 
de  ajo  grandes  y  peladas,  se  muelen  con  una  poca  de  sal  y 
se  les  unta  bastante  á  loa  lomos  á  que  se  lea  infurta  bien, 
luego  ae  embarran  de  bastante  manteca  y  se  meten  al  hor- 
no; dilatan  poco  nías  de  una  hora  en  cocerse.  Si  se  quiere 
se  sirve  con  la  salsa  siguiente: 

En  una  poca  de  manteca  se  echa  un  puno  de  harina,  pero 
antes  se  echa  una  poca  dé  cebolla  picada  y  perejil,  y  ya 
que  está  trasparente,  se  echa  la  harina,  no  á  que  dore  sino 
no  mas  á  que  sancoche;  ya  que  está  así  se  le  echa  una  po- 
quita de  agua  y  ya  que  se  va  á  comer  se  le  echa  una  yema 
de  huevo  desleída  en  un  poco  de  vinagre  y  no  se  calienta 
ya  con  el  huevo  porque  se  cuece. 

487.  Lomo  de  puerto  d  la  botonesa. -¿-Se  despoja  el  lomo 
de  la  grasa  que  lo  cubre,  sin  dejarle  sino  una  pequeña  capa. 
Se  arrolla  la  caí  ne  y  se  cubre  con  ramos  de  salvia  y  se  ata 
fuertemente  con  un  hilo.  Hecha  esta  operación  ae  pone  la 
carne  en  vinagre  por  dos  ó  tres  días  con  algunos  clavos  de 
especias  y  la  cortesa  de  uu  limón.  Al  sacarla  del  vinagre, 
se  mete  en  una  cazuela  con  la  mitad  del  miamo  vinagre  en 
que  estuvo  en  remojo,  una  tasa  de  caldo  desengrasado,  sal 
y  pimienta,  una  ó*  doa  cebollas  y  algunas  zanahorias  corta- 
das en  pedazos.  8e  deja  cocer  doa  ó  tres  horas  á  fu«go  vi- 
ro desde  luego,  y  moderado  después.  Luego  se  pone  en 
un  platón  para  serviilo  con  la  salsa  del  cocimiento  deten* 
gratado. 


158 

488.  Carne  de  puerco  en  aceite. — Tómese  pulpa  de  puerco 
y  rebánese  como  pera  bifteck.  Revuélquese  en  sal  y  pi- 
mienta; póngase  en  una  cazuela  y  cúbrase  con  aceite:  añá- 
danse especias  de  todas,  póngase  fuego  muy  lento  y  cuando 
este*  cocido  se  apea  y  se  deja  enfriar.  Se  coloca  después  en 
botes  de  vidrio,  se  cubre  con  el  mismo  aceite  en  que  se  co- 
ció y  se  tapa. 

489.  Lomo  de  pobre  — Se  fríe  en  manteca  y  se  le  mezclan 
especias  molidas  con  una  buena  porción  de  jitomates  coci- 
dos. Se  le  pone  el  agua  y  sal  necesarias,  y  ya  que  está  blan- 
do se  deja  secar,  agregándole  un  poco  de  vino  de  Málaga. 

490.  Guisado  de  ¿orno.— -Se  rebana  el  lomo  en  lonjitas  de 
menos  de  un  dedo  de  ancho,  se  pica  mucho  perejil,  cebolla 
y  ajo,  se  echa  en  una  cazuela  de  agua;  se  le  echa  aceite,  oró- 
gano,  pimienta  molida  y  jamón  crudo;  todo  esto  se  hace 
freir  con  el  lomo.  Tónganse  preparados  jitomates  asados  y 
molidos,  frianse  en  el  mismo  aceite  en  que  se  frió  la  carne 
y  el  recaudo,  póngale  el  agua  con  poca  sal,  orégano,  tomi- 
llo, laurel  desbaratado,  vinagre  de  Castilla;  después  que  ha- 
ya dado  algunos  hervores  añádase  medio  cuartillo  de  vino 
de  Jerez,  y  si  se  espesa  demasiado,  óchesele  mas  vino  pero 
no  agua  porque  se  corta.  Se  adorna  con  lechuga,  rábanos, 
chiles  y  aceitunas. 

491.  Lomos  en  adobo. — Se  toma  un  lomo,  se  rebana  y  se 
le  echa  un  poco  de  epazote  seco,  yerba  buena  y  orégano,  to- 
do seco;  se  muelen  cuatro  dientes  de  ajo,  pimienta,  comi- 
nos, laurel,  canela,  vinagre  de  Castilla  y  la  sal  correspon- 
diente. Se  muele  chile  ancho,  mulato  remojado  y  sin  tos- 
tar-y  se  deja  en  infusión  de  un  dia  para  otro.  Al  siguiente 
se  fríe  en  manteca. 


154 

492.  Aiado  de  lomo  de  puerco. — Cortado  el  lomo  de  un 
dia  paraiotro  ae  lava  con  .agua  caliente  y  se  clavetea  con  pe- 
dacitos  de  limón  y  dienten  de  ajo;  te  pone  en  infusión  de 
agua  de  sal  por  veinticuatro  horas,  pasado  este  tiempo  se 
saca  y  se  escurre,  se  unta  muy  bien  de  manteca,  se  envuel- 
ve con  un  papel  y  se  ata  con  una  pita  y  se  pona  á  la  parri- 
lla á  que  vaya  asándose  á  fuego  lento,  y  si  hubiese  menes- 
ter otra  untada  de  manteca  se  le  c|a  y  se  deja  á  que  quede 
bien  asado,  adornándolo  con  lo  que  uno  quiera. 

493.  Lomo,  de  puerco  relleno. — Se  maja  el  lomo  y  se  echa 
por  un  rato  en  agua  y  vinagre. .  Se  pican  unas  acelgas  coci- 
das, jitomate,  ajo  y  cebolla,  perejil  y  yerbas  de  olor,  clavo, 
pimienta  y  canela  molida,  todo  se  fríe  muy  bien  en  mante- 
ca y  también  se  muelen  unos  poquitos  de  cominos.  Se  abre 
el  lomo  por  lo  largo  y  se  rellena  con  lo  dicho,  se  cose  con 
una  hebra  y  después  se  sancocha  en  manteca  y  allí  mismo 
Be  le  echa  agua,  sal  y  mas  cosas  del  relleno;  se  deja  cocer 
con  poquita  agua  para  que  dé*  lugar  á  que  seque  bien.  Se 
advierte  que  se  tiene  cuidado  de  voltearlo  para  que  no  se 
pegue. 

494.  Lomo  de  puerco  enroU-ado.— Se  abre  el  lomo  por  en 
medio;  se  pica  cebolla,  perejil  y  unas  rebanadas  de  jamón 
con  pimienta  molida  y  un  poco  de  pan  rallado.  Yaque  todo 
está  revuelto  se  le  dan  tres  vueltas  al  lomo,  se  cose  para  que 
no  salga  el  relleno.  Se  pone  a  cocer  y  cuando  está  se  em- 
barra bien  de  manteca  y  se  pone  á  freír.  Luego  se  pone  en 
una  olla  y  se  rehoga  con  salsa  quese  hace  con  caldo,  cebolla, 
jitomate  y  ajo;  se  fríe  bien  esto  y  ae  echa  en  la  olla;  agregue. 
aele  comino  y  clavo  espesándolo  con  pao  rallado.  *  Se  adorna 
con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 


155 

495.  Lomos  rellenos.— r8e  rebana  el  lomo,  as  aplana  bien 
á  que  quede  muy  ancho.  Cuezanse  acelgas  y  f ríanse  con  ce- 
bolla, ajo  picado,  jitomate,  olavo  y  pimienta;  rellánese  con 
esto  los  lomos  y  amárrense  con  un  hilo.  Fríase  en  mante- 
ca un  jitomate  entero,  unos  dientes  de  ajo  y  revuélvase. 
Fríase  antes  el  lomo  en  crudo  y  cuando  esté*  ya  frito  se  le 
echa  el  recaudo.  Póngase  un  poco  de  agua  y  vinagre,  oréga- 
no y  sal,  y  procúrese  que  no  quede  el  caldo  muy  espeso. 

496.  Carne  de  puerco  frita  á  la  montuno-pinero. — Tómese 
la  carne  de  puerco  y  sálese  bien;  después  que  ha  tomado  la 
salazón,  se  parte  en  pedazos  regulares;  óchase  á  freír  con 
manteca  en  una  cacerola;  luego  que  está  frita  se  saca  y  po- 
ne en  un  platón,  y  en  la  misma  grasa  de  la  cacerola  se  echan 
plátanos  verdes  partidos  en  rebanadas;  cuando  se  hayan  fri- 
to se  colocan  por  encima  de  los  pedazos  de  la  carne  de  puer- 
co, y  se  sirve  oon  arroz  blanco. 

497.  Landrecilla  de  jamón  con  chícharos, — Una  vez  cor- 
tada la  carne  del  jamón,  queda  la  parte  central,  que  se  llama 
landrecilla.  Se  desala  esta  durante  veinticuatro  horas  y  lue- 
go se  pone  á  cocer  en  una  olla  llena  de  agua,  con  dos  cebo- 
llas mechadas  con  dos  clavos  de  especias  y  un  ramo  de  yer- 
bas finas.  Cuando  la  agua  empieza  á  hervir  se  espuma  la 
olla  y  se  deja  en  ella  la  landrecilla  durarte  dos  horas;  luego 
se  saca  y  el  caldo  es  muy  bueno  para  una  sopa. 

Se  cubre  después  el  fondo  de  la  olla  con  dos  ó  tres  lon- 
chas de  tocino  y  un  trozo  'de  ternera  magra,  encima  -de  la 
que  se  coloca  la  landrecilla  con  las  cebollas  y  las  yerbas  y  se 
le  añade  un  poco  de  vino  blanco,  dejándolo  cocer  todo  á  fue- 
go lento. 

Se  cuecen   aparte  chícharos  frescos  y  cuando  ya  están  co- 


16* 

ciclo»  te  retira  la  landrecilla  de  la  olla,  ee  Halla  en  el  jugo  á 
que  se  empape  bien,  después  de  haberlo  desengrasado.  Si 
la  salta  estelara  se  reduce  y  se  le  echan  los  chícharos,  que 
se  dejan  cocer  durante  un  cuarto  de  hora.  Se  colocan  lue- 
go en  un  platón  y  se  sirvo  la  landrecilla  sobre  los  chícharos 
muy  calientes. 

498.  Puerco  frito  á  lo  habanero.  — Prepárese  en '  un  platón 
un  adobo  de  vinagre,  orégano,  sal,  un  poco  de  pimienta  mo- 
lida y  unos  ajos  machacado»;  échese  en  este  caldo  la  carne 
de  puerco  partida  en  pedazos;  cuando  se  conozca  ha  toma- 
do bien  el  gusto  del  adobo,  se  saca  la  carne  y  se  pone  á  freír 
con  manteca.  Sírvase  con  plátanos  verdes  6  pintos  fritos  y 
con  arroz  blanco. 

499.  Puerco  ahumado  de  monte. — Se  lava  bien  la  carne  de 
puerco,  se  le  hacen  cortaduras  á  lo  largo,  poro  sin  que  se 
separen  las  tiras;  se  sala;  y  para  que  desprenda  el  agua  de 
la  salamuera  se  le  deja  un  dia  al  sol;  después  se  va  colocan- 
do por  capas  en  unas  horquetas;  se  ponen  al  fuego  echando 
en  las  brasas  hojas  de  laurel  para  que  produzcan  humo;  dé- 
jese la  carne  al  fuego  hasta  dorarse,  y  después  se  dispone 
de  ella  para  lo  que  se  quiera. 

500.  Albóndigas  de  carne  de  puerex — Se  pica  el  lomo  de 
cabeza  y  carne  maciza,  se  pone  en  una  cazuela  y  se  le  echa 
clavo,  canela  y  pimienta,  sal,  tres  6  cuatro  huevos  crudos  y 
un  pedazo  de  pan  remojado.  Se  amasa  bien  y  se  toman  ra- 
ciones de  carne  picada  del  taroafio  de  una  empanada  grande, 
se  extiende  en  un  picador  limpio  y  se  les  mezcla  tiras  de 
jamón,  pedazos  de  huevo,  pasas,  almendras,  pifiones,  alca- 
parras y  aceitunas  picadas.  Después  se  forma  la  empanada. 


157 

Pongas*  ana  cazuela  con  agua,  y  cuando  esté*  hirviendo  se 
echa  la  masa.  Ya  que  está  cocida  se  saca  y  se  hacen  reba- 
nadas de  un  grueso  regular,  se  revuelcan  en  harina  y  se  fríen 
como  chiles  rellenos.  Póngase  en  una  cazuela  manteca  con 
un  ajo  picado,  déjese  freír  y  añádasele  jitomate  molido  sin 
pepitas;  refríase  y  échese  en  la  cazuela  caldo  del  en  que  se 
frió  la  empanada,  con  clavo,  canela  y  pimienta;  déjese  her- 
vir y  cuando  el  caldillo  esté  espeso  échense  las  rebanadas 
fritas.     Al  llevarlas  á  la  mesa  se  rocían  con  vino  de  Jerez. 

601.  Otra*  albóndigas. — Mézclese  carne  de  puerco,  de  ter- 
nera y  de  carnero.  Quítensele  los  pellejos.  Muélase  clavo, 
canela  y  pimienta,  orégano  y  tomillo.  Bájese  del  metate 
con  leche  con  un  pedazo  de  pan  remojado  desde  antes  en 
leche  y  revuélvase  con  la  carne  junto  con  las  especias,  ja- 
món picado,  huevo  crudo,  pasas,  almendras,  alcaparras, 
dos  Uemas  de  huevo%crudas  y' vino  de#Jerez.  Todo*  esto  se 
pone  en  una  servilleta  en  forma  de  bola  y  en  medio  se  le  po- 
ne un  huevo  cocido  mechado  con  tiras  de  jamón,  se  amarra 
en  la  servilleta  y  se  pone  á  cocer  en  agua  con  sal  y  los  pe- 
llejos que  se  quitaron  á  la  carne.  Se  tapa  y  de  cuando  en 
cuando  se  pica  con  un  trinche  para  conocer  cuando  ya  esté 
la  carne  cocida.  Entonces  se  desata  la  servilleta  para  que 
la  carne  se  enfrie  un  poco.  Se  dora  una  cabeza  de  ajo  me- 
dio machacada  y  ya  que  está  bien  dorada  se  echan  en  la 
manteca  dos  cucharadas  de  harina:  cuando  ya  está  dorada 
■e  cuela  en  la  agua  en  que  se  coció  el  albondigon,  y  se  echan 
allí  mas  especias,  que  se  sacan  de  las  mismas  que  se  echaron 
á  la  carne;  añádase  medio  pocilio  de  vino  de  Jerez,  dos  ó 
tres  hojas  de  laurel,  perejil  deshojado,  bastante  cebolla  re- 
banada y  el  albondigon  para  que  se  acabe  de  cocer. .  Ya  no 


158 

te  muele  el  albondigon  mas  que  con  un  trinche  pera  darle 
vueltas  y  se  deja  espesar  el  caldo  un  poco. 

602.  Otras  con  calabacines. — Piqúese  carne  maciza  y  lo* 
mo  de  cabeza;  ja  picada  la  carne  échense  dos  6  ti  es  huevos 
crudos  y  un  poco  de  sal  y  pimienta  y  muélase  bien.     Pón- 
gase en  una  cazuela  manteca,  dos  ó  tres  manojos  de  cebo, 
lia  en  gajos,  uno  ó  dos  jitomates  picados,  perejil  también 
picado;  ya  que  está  frito  póngase  harina  y  déjese  freír  mas 
todo  junto;  ya  que  está  frito  se  pone  el  agua.     Muélase  cla- 
vo, canela,  pimienta  y  dos  ó  tres  dientes  de  ajo,  háganse 
las  albóndigas  y  échense  en  el  caldillo  con  calabacines  en- 
teros.    Déjese  cocer  un  poco  antes  de  servir. 

603.  Otras  albóndigas. — Se  pica  la  carne  de  lomo  y  maci- 
za; se  echa  en  una  cazuela  con  dos  ó  tres  huevos  cocidos  con 
sal,  clavo,  canela  y  pimienta  molida,  un  poco  de  queso  ane- 
jo marta  jado,  cebolla  y  perejil  picados,  se  revuelve  bien,  se 
pone  en  una  sartén  con  manteca',  se  hacen  las  albóndigas 
como  es  costumbre  y  se  fríen;  se  pone  aparte  en  una  cazue. 
la  manteca,  cebolla  picada,  ajo  y  uno  ó  dos  jitomates  y  se 
fríe;  se  tuestan  almendras  en  un  comal,  se  muelen  y  se 
echan  á  f  reir  en  la  misma  cazuela  y  se  le  agrega  agua;  mué- 
lase clavo,  canela,  pimienta  y  un  pedazo  de  pan  frito;  un 
poco  de  perejil  picado  y  otro  de  tomillo.  Déjese  hervir  y 
cuando  esté  espeso  se  echan  allí  las  albóndigas,  déjese  que 
den  unos  hervores  y  sírvanse. 

604.  Otras  albóndiga»  Jina4.-+8e  pica  carne  maciza  y  se 
le  quitan  loa. pellejos;  fríanse  aparte  unos,  manojos  de  ce- 
bollas y  perejil;  échese  en  la  cazuela  ero  la  carne  con  uno 
6  dos  huevos,  clavo,  un  polvo  de  pimienta,  sal  y  pan  remo- 
jado; muélase  bien  todo  y  háganse  las  albóndigas  que  se 


169 

echarán  en  el  caldillo,  poniendo  antes  en  cada  una  de  ellas 
un  pedazo  de  jamón  y  otro  de  huevo. 

505.  Asadura. — Se  pone  á  cocer  con  tomillo,  mejorana  y 
laurel.  Se  fríe  cebolla  y  jitomate,  mí  que  está  bien  frito  el 
recaudo  se  le  echa  un  poco  de  pan  á  que  dore  y  no  se  dore 
mucho  y  las  asaduras  picadas,  separando  unos  cuantos  pe* 
dazos  para  molerlos  con  las  especias  y  un  diente  de  ajo.  Se 
revuelve  lo  molido  con  un  huevo  y  se  le  echa  también  al 
calentarlo  para  ir  á  la  mesa  un  poco  de  aceite  y  se  adorna 
el  platón  con  perejil  picado,  alcaparras,  huevo  cocido  y  pan 
frito. 

Las  asaduras  al  acabarse  de  cocer  se  enjuagan  en  agua 
tibia,  el  pan  ha  de  ir  frito  aparte. 

506.  Asadura  de  puerco. — Se  parte  en  pedacitos  y  se  echa 
en  agua  para  que  desengrase.  Se  pica  mucha  cebolla,  ajo, 
jitomate  y  perejil,  todo  muy  menudo.  Se  pone  en  una  ca- 
zuela con  manteca  todo  junto,  con  pedazos  de  jamón  y 
unas  costillas  también  de  puerco  y  se  sancocha;  agregúe- 
sele orégano,  tomillo  en  polvo  y  especias  de  clavo,  canela  y 
cominos  molidos.  Ya  que  está  frito  se  pone  el  agua  sufii- 
eiente  para  que  cueza  y  vinagre  de  Castilla;  se  puede  dejar 
con  caldo  ó  adobada.  Se  sirve  con  chiles  en  vinagre,  acei- 
tunas y  alcaparras. 

607.  Maletas  de  lamo. — Se  ponen  á  cocer  chícharos,  ha- 
bas verdes  y  ejotes;  después  que  ya  están  cocidos  y  pica- 
dos se  fríen  en  aceite  y  manteca  con  su  sal,  un  polvo  de  pi- 
mienta^ un  poco  de  queso;  ya  que  se  está  acabando  se  de- 
ja freir  bien  y  después  se  rellenan  oon  esto  unas  rebanadas 
de  lomo  de  puerco  y  se  van  amarrando  con  un  hilito;  para 
que  queden  bien  apretadas  y  no  se  salga  el  relleno,  se  po- 


180 

nen  á  cocer  en  poca  agua  con  una  poquita  de  sal;  se  fríen 
también  en  manteca  y  aceite  unos  dientes  de  ajo  que  se 
muelen  con  unos  jitomates  asados;  se  vuelve  á  freir  el  re- 
caudo  hasta  que  se  refría  mucho,  mucho;  entonoes  se  echa 
allí  la  carne  á  que  se  sancoche  con  el  recaudo,  y  ya  que  es- 
tá se  le  echa  una  poquita  de  agua  para  que  se  sazone. 

608.  Costillas  de  cerdo. — Se  cuecen  con  caldo  y  un  ramille- 
te de  tomillo,  yerbabuena,  perejil  y  otras  yerbas  aromáticas, 
sal  y  pimienta.  Se  pone  en  una  cazuela  manteca  y  harina, 
se  rehoga  con  caldo,  vino  blanco,  perejil,  cebolls,  media  ca- 
beza de  ajos  y  clavo;  después  de  cocido  se  echa  la  salsa  so- 
bre las  costillas  y  se  sirven. 

509.  Costillas  asadas, — Cortadas,  preparadas  y. aplanadas 
se  ponen  en  el  asador  oon  un  poco  de  manteca,  y  mientras 
se  asan  se  les  oubre  con  miga  de  pan  mezclada  oon  sal,  pi- 
mienta y  yerbas  finas;  se  sacarán  cuando  están  en  punto, 
añadiendo  á  su  manteca  ralladura  de  pan,  un  poco  de  hari- 
na y  un  vaso  de  vino  blanco;  se  dejará  consumir  un  poco,  y 
se  le  echan  pepinillos  cortados  en  rebanadas. 

510.  Codillos  de  cerdo  asada*. — Se  preparan   y  se   ponen 
n  el  asador  oon  manteca  y  mientras  se  asan  se  vanacubríen- 

do  con  miga  de  pan  mezclado  con  sal  pimienta  y  yerbas  finas. 
Cuando  están  en  su  punto  se  les  añade  un  vaso  de  vino  blan- 
co, un  poco  de  harina  y  ralladuras  de  pan. 

511.  Costillas  de  cerdo  en  parrillas,  con  adobo. — Se  tienen 
en  adobo  por  dos  dias  con  orégano,  tomillo,  perejil,  sal  y 
rajas  de  cascara  de  limón;  después  se  sacan  y  ponen  en  una 
parrilla  ancha  á  un  fuego  moderado;  después  de  haberlas 
vuelto  y  que  estén  en  punto  se  expolvorean  con  sal  y  pimien- 
ta para  servirlas  con  salsa  picante. 


161 

512.  Costilla*  de  cerdo  en  la»  parrilla*. — Se  aplanan  co- 
mo si  f  besen  de  ternera,  cuidando  de  que  no  lea  quede  mu- 
cha grasa.  Se  ponen  en  las  parrillas  dándoles  algunas  vuel- 
tas  para  que  cuezan  perfectamente  sin  colorearse.  Se  sir- 
ven  con  salsa  española.  Pueden  servirse  también  con  sal- 
sa  de  jitomate,  con  una  requemada  de  manteca  y  pepinillos 

cortados  en  rodajas,  y  se  acomodan  con  la  mayor  parte  de 

a .-..    ....  *    •  r  :.«•.■  "  '   ■•    *    •*■  . 

513.  Jamón  atado, — Se  toma  un  pemil  desalado  ya,  y  se 
tiene  en  vino  blanco  por  espacio  de  diez  ó  doce  horas,  se  le 
mete  en  eFasádor  y  sé  le  tiene  por  seis  horas  á  fuego  templa- 
do, bañándole  continuamente  con  lo  que  echa  de  sí;  ouando 
este*  en  su  punto  se  le  quita  el  pellejo  y  se  le  polvorea  con 
miga  de  pañi  Al  tiempo  de  servirlo  se  le  echa  zumo  de  li- 
món. 

514.  Jamón  cocido.— Después,  de  limpio  y  quita/la  la  par- 
te rancia,  se  corta  y  pone  á  desalar  por  dos  dias  en  agua 
fria,.se  ááca'y  enjuga ?  y  después  se  pone  á  cocer  envuelto 
en  un  lienzo  blanco  con  una  mitad  de  vino  y  agua,  ajos, 
cebollas,,  tomillo,  laurel,  clavo  de  especia  y  yerbas  finas;  se 
conoce  cuando'  está  cocido  picándole  con  un  meshador,  se 
sácji  y  quita  él  hueso  de  entnedio,  y  cuando  está  frío  se  le- 
vanta el  pellejo  y  se  cubre  la  grasa  que  le  rqdea  con  una 
mezcla  de  yerbas  finas  y  pan  rallado. 

515.  Jamón  al  natural.  — Quítese  la  sal  al  jamón ,  ponién- 

dolo  en  agua  después  de  haberle  hecho  unas  cortaduras  en 

4  .•  >.r.i    f ,'!  v    /•.• ,  •.  -  W    J-  ,         -.'»'*: 

la  superficie  de  lo  magro  y  las  orillas  del  gordo.     Cuando 

-•■•'Vi    T-  *-    '  ••■rr^%     •  »■  •  •',.    .-•-•■•*."•     ..■-•¿•■::* 

esté  desalado  se  ensuelve  en  ün  lienzo,  que  se  anuda:  pon- 
irase  en  una  cacerola  de  su  largo  y  ancho,  echando  por  on- 
cima  dos  cuartillos  de  agua  y  otros  dos  de  vino  tinto,  aña- 

LA  COCDTSRÁ  POBLABA. — TOM. — L    11 


162 

danse  raíces,  cebollas  y  buen  manojo  de  perejil  y  yerbas 
finas,  y  déjese  cocer  cinco  ó  seis  horas  á  fuego  muy  lento. 
Cuando  esté  cocido  se  deja  enfriar  en  el  mismo  caldo;  sa- 
qúese de  éste  y  levántese  la  corteza  sin  quitar  nada  de  to- 
oino;  échese  encima  pimienta  y  pan  rallado,  désele  color 
con  la  plancha  hecha  ascua  y  sírvase  frió. 

Los  jamones  pequeños  nuevos  se  hacen  en  asador  y  se 
sirven  calientes  ó  fríos  como  intermedio,  pero  es  menester 
desalarlos  mucho  mas. 

•  ■ 

.516.  Jaman  frito.—  Antes  de  f reírlo  es  preciso  darle  un 
hervor  para  desalarlo,  después  se  corta  en  magna  6  peque- 
ñas lonjas  delgadas  y  se  fríen  de  modo  que  ño  lleguen  á  en- 
durecerse ó  tostarse  demasiado.  Se  sirve  con  rebanadas  de 
pan  fritas  en  la  misma  sustancia,  con  una  salsa  de  jitomate 
ó  con  huevos*  estrellados. 

517.  Jamón  en  asador. — Prepárese  y  póngase  en  adobo 
de  buen  vino  blanco  con  cebollas,  zanahorias  en  rebanadas 
tomillo  y  laurel.  Se  cuidará  que  la  vasija  esté*  érmé'ticá- 
mente  cerrada  con  un  paño  y  su  tapadera  ú  otra  vasija  de 
igual  grandor.    Póngase  en  el  asador,  y  mientras  está  asan- 

dose  rocíese  con  su  mismo  adobo;  cuando  ésto  medio  coci- 

'    •  ■  ■  i 

do  quítese  la  corteza,  espolvoréese  con  pan  rallado  y  vuél- 
vase al  fuego  para  dorarlo;  sírvase  con  su  adobo,  que  se  ha- 
brá colado  y  hecho  reducir  f  consistencia  de  sjalsa. 

518.  Jamón  cocido  con  tino  blanco.—  Después  de  haber 
estado  el  jamón  doce  ó  mas  horas  en  remojo,  se  le  corta  el 
garrón  y  se  pone  á  cocer  en  agua,  lo  menos  hora  y  media; 
luego  se  saca  y  escurre,  y.  se  pone  en  una  cacerola  ó: vasi- 
ja á  proposito  oori  vino  blanoo  que  le '  bañó.  Sé  le  echan 
unas  rajas  de  canela,  media  docena  de  clavillos  enteros  y 


< . 


103 

unas  hojas  de  laurel;  si  se  quiere  dulce,  se  le  añade  una  li- 
bra de  azúcar,  7  puede  servirse  en  fiambre,  pero  se  le  echa- 
rá encima  azúcar,  que' se  tostará  con  una  plancha  candente. 

519.  Jamón  con  legumbres. — Se  elije  un  jamón  de  cerdo 
joven,  se  cuece  en  un  adobo  de  salsifíes,  cebollas,  laurel, 
tomillo,  ajo,  perejil,  hasta  que  el  caldo  está  hecho  jaletina; 
se  coloca  el  jamón  en  un  plato  hondo,  para  rodearle  y  cu- 
brirle con  salsifíes,  espinacas,  ejotes,  lechugas,  cebollas 
cocidas  en  caldo  6  bien  con  ohíoharos  que  hayan  estado  en 
remojo  y  se  hayan  cocido  después  en  caldo  6  salsa  española 
espeía,  que  se  echará  por  encima,  poniendo  el  extremo  del 
jamón  oh  úrt  papel  blanco  cortado  ea  forma  circular. 

520.  iTatñón  frito  eoh  chibe. — Después  de  limpio  y  desala- 
do se  parte  eñ  lonjas  delgadas  y  sé  fríe;  cuando  este*  á  me- 
dio freír,  se  le  echa  un  vasito  de  vino  de  Jerez  ó  blanco  y 
una  cucharada  de  azúcar,  y  se  deja  á  fuego  lento  un  ratito, 
sirviéndolo  después  en  el  plato  con  su  misma  salsa. 

521.  Jamón  abeeugado. — Prepárese,  desálese  y  cúbrase 
como  el  jamón  al  natural,  póngase  en  una  besuguer*  sobre 
lonjas  de  carne,  rajas  de  cebolla  y  de  zanahoria,  perejil, 
tomillo,  laurel,  clavo,  etc. ;  mójese  en  agua,  y  cuando  está 
medio  cocido  se  le  añade  una  copa  de  buen  aguardiente;  se 
cuidará  de  no  volver  á  tapar  la  besuguera.  Cuando  esté  co- 
cido del  todo  se  le  quita  la  corteza  y  se  baña,  sea  oon  re- 
ducción de  ternera,  sea  con  azúcar  en  polvo,  sobre  la  .que 
se  pasará  la  plancha  hecha  ascua,  si  no  se.  prefiere  mejor 
ponerlo  en  el  horno  ó  en  el  de  campaña  á  que  tome  buen 
color.  Puede  servirse  sobre  el  guiso  de  legumbres  que.  me- 
jor  parezca. 

522.  Otro  jamón  en  jnúqut* — Después  de  muy  remojado, 


164 

lavado  y  refregado  oon  escobeta,  se. pone  á  cocer  en  polque, 
agregándole  culantro  seco  y  entero,  una  panela,  un  poco 
de  laurel  y  bastante  pimienta  de  ^abasco.  .  Una  vez  cocido 
te  escurre  y  deja  enfriar,  se  redondea,  se  pone  vino  de  Je- 
rez  en  una  sartén  y  sé  sancocha  el .  jamón;  se  coloca  en  un 
platón  con  la  parte  magra  háoia  abajo,  se  le  polvorea .  con 
asacar  por  encima  y  por  los  lados,  se  le  baña  bien  de  cata- 
lán superior  y  se  prende.  Debe  llevarse  á  la.  .mesa  cuando 
arde  todavía  el  catalán. 

623.  Jamón  con  tepache. — Después  de  desalado  y  limpio 
se  pone  á  medio  cocer  en  agua;  ya  medio  .cocido  se  tira  el 
agua  y  se  le  echa  en  el  acto  un  poco  de  tepache  <5  agua.de 
pina,  un  cuartillo  de  vino  de  Jerez,  especias  de  todas,  mo- 
lidas, orégano,  hojas  de  laurel,  otras  de  naranjo  y  media 
libra  de  azúcar.  Guando  está  bien  cocido  se  saca  y  se  deja 
enfriar,  se  le  quita  el  cuero,  se  espolvorea  con  azúcar,  en 
polvo,  se  quema  con  una  plancha  muy  caliente  y  se  adorna 

al  gusto.  i 

624.  Magras  con  pulque. — Se  echan  en  una  olla  las  sa- 
gras, vino,  pulque,  laurel,  orégano,  tomillo,  comino,  alñio- 
radúz  y  vinagre.  Se  cuece  el  jamón  en  la  olla  que  se  ha  de 
tapar  muy  bien  á  fuego  manso;  cuando  ya  está  cocido  se 
saca  y  escurre;  se  muele  azúcar  y  se  polvorea  el  jamón;  se 
pasa  por  encima  y  por  ambos  lados  un  fierro  caliente'  y  se 
sirve. 

:  626: :  Magras  aragonesa», — Sé  coje  una  libra  de  jamón  ele 
la  mejor  clase,  se  lava  bien  y  sé  refriega  con  una  escobeta 
y  luego  se  raspa  oon  un  cuchillo  para  qué'  suelte  iodo  el  al- 
magré.  Ya  limpio  sé  pone  á  cocer  en  una  olla  con  agus; 
después  se  corta  en  rebanadas  del  tamaño  de  un  cigarro. 


165 

Se  ha  dé  procurar  que  el  jamo  a  tenga  mucho  magro  y  so- 
bretodo  que  no  esté*  rancio.  Se  pone  aparte  en  una  ca- 
zuela aceite  y  manteca  y  se  le  >cha  ajó  y  cebolla  á  que  san- 
coche  con  un  poco  de  perejil;  va  sancochado  se  toman  acei- 
tunas gordas,  se  pican  menuditas  y  se  dejan  íreir  con  alca- 
parras!. Se  toman  luego,  jitomates  muy  maduros,  se  destri- 
pan y  se  pican  crudos,  se  echan  en  la  cazuela  y  se  fríen  mu- 
cho;  se  muele  clavo  y  pimienta  y  se  le  agrega.  Cuando  es- 
'&  «azonado  se  echan  las  magras  y  si  falta  aceite  se  agrega  y 
sé  deja  espesar.  Se  adorna  con  aceitunas  gordas,  alcapa- 
rras! alcaparrones  y  tostadas  de  pan  fritas  en  aceite. 

026:  Mttfrds.  —Se  cuece  jamón  con  chorizonés,  y  así  que 
está  cocido  se  muelen  jitomates  asados,  pan  frito,  ajos  do- 
rados  en  manteca  y  yerbas  finas.  Se  fríe  todo  bien  y  se  le 
agrega*  un  poco  del  agua  en  que  se  coció  el  jamen,  se  deja 
hervir  y  se  le  incorporan  los  chorizonés  con  jamón  rebana- 
do:' '  íf  caldo  debe1  quedar  espeso  y  sé  adorna  con  rebana- 

■ 

das  de  pan  frito,  huevo  cocido,  chiles,  aceite  y  perejil  pi- 
cado. 

527.  Otra*. — Se  pone  á  cocer  el  jamón  con  tomillo,  lau- 
rel, mejorana,  ajos  machacados  y  un  poco  de  vinagre.  Cuan- 
do está  cocido  se  rebana;  se  fríe  bastante  jitomate,  cebolla, 
ajo  y  perejil;  ¿  medio  freír  se  le  echa  el  jamón  y  se  deja  freir 
bien  para  que  sazone;  se  le  agrega  agua  de  la  misma  en  que 
coció*  éf  jamón  y  se  deja  espesar. 

52&  Magra»  de  jamón  rebanada*. — Se  tuestan  rebanadas 
de  jamón  que  no  están  ni  muy  gruesas  ni  muy  delgadas,  y 
entre  dos  de  ellas  se  pone  jaro  >n  cocido  picado  muy  menú- 

•  •  •  •  • 

do  y  ajó  menudo  también.  Sc<  echa  en  una  cazuela  un  po- 
co de  agua  y  manteca  en  la  qr  e  se  pone  mas  ajo;  cuando  se 


contum><5  el  agua,  te  cctya  cebolla  picada  muy  jmfinnó>  y  c,u« 
debe  ser  en  cantidad  ¿orno  ana  tercera  parte  del  jamón. 
Cuando  está.  ya.  cocida,  se  echa  jitomate  molido  sin  pepitas, 
ajoa  erados  y  un  poco  de  pimienta.  Ya  que  está  sazonado 
se  echa  el  jamón  y  para  cada,  media  libra  dos  yemas  de  hue- 
ro cocidas  y  molidas,  que  se  bajarán  del  metate  con  muy 
poca  agua;  esto  se  incorpora  á  lo  frito  con  un  pooo.de  pere- 
jil fresco  muy  menudo,  alcaparras,  aceitunas  picadas  y  un 
poco  de  aceite.     Sé  deja  espesar  y  se  sirve. 

529.  Magras  etUomatadas. — Se  .rebana,  el  jamonde  un 
grueso  regular;  se  pone,  á  hervir  en  poca  agua,  en  un*sarten 
y  se  meten  las  rebanadas  tres  ó*  cuatro  minutos;  se  sacan  y 
escurren.  Se  pone  á  calentar  manteca,  y  se  medio  doran, 
luego  se  sacan,  se  echa  en  la  misma  manteca  un  puco  de  ce- 
bolla menuda  y  mucho  jitomate  picado  en  crudo.  Ya  .bien 
frito  se  incorporan  las  magras  j  se  dejan  sazonar  tyfuv 

\  690.  Qmm*p*¿£-^m  pone  á  cocer  un.  «be^7  cus- 
tro  pié*s  con  sal,  una  cabeza  de  cebolla,,  perejil  y  ajq;  á  me- 
dio cocer;  sé  deshuesa  y  corta  en  pedacitos,  se  revuelve  sal 
y  pimienta,  cebolla,  picada  muy  menuda  y  se  revuelre  todo, 

•  •       •  *  ...  • 

se  unta  el  molde  con  manteca,,  se  e/cha  en  el  la  carne  y  se 
aprensa.  Al  otro  dia  se  saca  del  molde;  y  se  pone  en  un  pla- 
ton..    . 

531.  Otro  (futo  ue  puerco. -^S*  pone  á  cocer  la  cabeza,  en 
uña  cazuela  grande  con  agua  y  sal,  pimientas  .gordas  y  delga- 
das enteras,  tomillo,  mejorana,  laurel,  perejil,  /cebollas, 
ajos  y  un  poco  de  pimienta  molida.  Antes  de  ponerla  ¿co- 
cer se  limpia  muy  bien  en  agua  caliente,  se  raspa  con  un 
cuchillo,  se  le  corta  el  hocico  y  se  sacan  los  dientes.  Cuan- 
do  está  casi  cocida  se  echa  á  la  cazuela  una  libra  de  jamón 


167 

par»  qué  se  cueza  también;  se  parten  ambas  carnes  en  peda- 
sos  menudos,  sé  ponen  en  molde  y  se  aprensan  bien.  De- 
ben dejarse  en 'el  molde  doce  horas. 

532. '  Queso  de  cabeza  de  puerco.  —Se  parte  la  cabeza  en  pe- 
dazos grandes  quitándole  un  pedazo  de  papada  si  estuviese 
muy  grande,  se  pone  á  cocer  todo  con  la  lengua  con  sal  y 
yerbas  de  olor:  así  que  esté  cocida  pero  no  mucho  para  que 
no  se  desbarate,  se  aparta,  se  le  quitan  los  huesos  y  se  par- 
te en  pedazos  grandeoitos;  lo  mismo  la  lengua;  se  muelen 
bien  veinticinco  clavos  y  treinta  pimientas  delgadas,  un  pe- 
dazo regular,  una  nuez  moscada  chica  molida;  se  baja  del 
metato  con  una  taza  de  vinagre  de  Castilla  y  otra  de  vino 
de  Jerez;  todo  se  revuelve  con  la  cabeza  ya  partida,  y  se 
echa  en  una  sartén,  echándole  mas  sal  si  le  faltare,  molida; 
se  sancocha  todo  bien  y  así  caliente  se  echa  en  una  bolsa  de 
una  cuarta  de  vuelo  para  que  salga  grande,  se  amarra  lo  mas 
apretado  que  se  pueda  y  se  pone  á  aprensar  con  bastante  pe- 
so por  encima  para  que  salga  la  grasa  procurando  quede  bien 
redondo  y  lo  amarrado  quede,  én  medio;  así  que  está  frió  se 
descose  la  bolsa  para  sacarlo. 

Si  se  quiere  se  le  pueden  agregar  las  patas,  solo  que  se  le 
añaden  mas  especias,  vino  y  vinagre  en  proporción  al  Unte. 

533.  Cochinito  en  $alchichone$. — Se  deshuesa  con  cuidado 
á  que  no  se  rompa;  se  tasajea  y  rellenan  las  tripas  con  ja- 
món, alcaparras  y  especias  de  todas,  enteras  6  molidas,  chi- 
le ancho  en  polvo,  sal  y  orégano;  se  rocía  la  carne  con  vino, 
se  le  agregan  pasas,  almendras  y  piñones;  se  amarran  de  mo- 
do que  nada  se  salga. :  Se  ponenjspana  cazuela  en  tres  tan- 
tos de  vino,  vinagre  y  agua,  á  dos  fuegos  y  se  toman  fríos  y 


168 


secos.     Si  m  quieren  tomar  calientes  ae  espeta  el  caldo  oon 
pan  tostado  6  harina. 

634.  Cochinito  de  leche  a*Kla.-*Se.  sance^^a.  laooofeinita 
en  un  tanto  de  apua  y  otro  de  vinagre^  seis  .cabezas  de  ajo 
molidas,  clavo,  canela,  y  pimienta,  un  poco  de  orégano  de 
china,  tobillo  y.  laurel.  Ta  que  está  cocida  se  pone  una  tor- 
tera  untada.de  manteca  y  luego  se  pone  á  dos  fuegos  ¿  se 
lleva  al  horno.     Se  adorna  con  cebolla,  naranja  y  lechuga. 

636.  Otro. — Se  mata  el  cochinito  recibiendo  1*  .sangro  en 
una  cazuela;  se  lava  con  agua  fyirviendo,,  se  abre,  y  Jaya.oon 
agua  fría;  ha  de  quedar  entero  y  se  pone  epnna  tortera  de 
hierro  sin  que  quede  oprimido.  Se  muelen  ajosf cominos,  fca- 
nela,  clavo  y. pimienta,  se, revuelve. todo,  con  mejiteca^ay 
sal. .  Se  unta  el  cochinito  por  todas  partes  y  se  pone  en  la 
lumbre  tapando  la  tortera  y  teniendo  cuidado,  de  seguir  em- 
b.»rrando  el  cochinito  para  que  np  se,  queme..,  í?l  fuego  de- 
be ser  lento,  pues  no  llera  el  guiso  mas,.,  agua  que  la  de  las 
especias.  Se  adorna  con  cogollos,  de  lechuga,  ce]^olla,  li- 
món ó  naranja,  aceitunas  y  chiles  en  vinagre^ 

636.  Lengua  en  vinagre. — Se  pone  4  cocer  Ja  lengua  oon 
vinagre,  sal  y  agua.  Póngase  aparte  en  una  olla  un  cuarti- 
lio  de  vinagre  con  cabezas  dé  ajo,  timas  cebollas1  A  las  <|ue  se 
hará  una  simple  cortada  arribé,  laurel,  tomillo,1  orégano,  pi- 
mienta gorda, y  delgada  enteras,  y  aaL  TápeseleVboba  de  la 
olla  con  un  trapo;  rebánese  bástanle  jitomate'  y  cebolla, 
póngase  á  quemar  bien  aceite  español,  y  frías*  en  41  el  ¿jito- 
mate-y  4a  cebolla.  Hecho  esto  se  despelleja  la  lengua,  se  re- 
bana y  se  ochaven  lo  frito;  al  cualeeañade  todo  el  recaudo 
déla  olla  con  el  vinagreaioSe  deja  enfriar  y  se  aliña  con 

SJS^t^^VAS^S7    A  A  eWSja  «i^S9iSw 


169 

537-  Lengua  de  cerdo. — Se  cuece  con  cualquier  «salsa  pi- 
cante, y  ordinariamente  te  pone  al  humo  salad*  para que  se 
seque  y  así  se  conserva. 

638.  Lengua  de  puerco. — Se  apaléala  lengua  en?  i 
limpia  bien  y  se  onece  después;  ya  cocida  se  rebau*,  »*  pi- 
can muy  menudos  jitomates,  perejil  y  ajos,  y  se  frie;  ya 
bien  frito  esto  ae  le  echa  el  caldo  en  que  se  coció  la  lengua 
colándolo  antes;  póngaseje  clavo,  canela  y  pimienta  mo- 
lida, un  poco  de  vinagre  y  después  échese  la  lengua  prepa- 
rada como  se  ha  dicho;  déjese  hervir  bastante  á  fuego  len- 
to;, ya.  que  están  casi  de  sazón  se  polvorean  con  pan  rallado 
y  queso  molido  á  que  solo  dé  un  hervor.  Se  adorna  con  al- 
caparras y  chiles. 

630.  Lengua  con  chícharo*.  —Se  lava  muy  bien  y  se  pone 
á  cocer  con  yerbas,  ajo  machacado,  dos  gajos  de  cebolla, 
vinagre,  clavo,  canela  molida  y  pimientas -.enteras.  Se  re- 
bana cebolla  cocida  y  se  despelleja,  Fríanse  gajos  de  cebo- 
lla en  manteca  y  aceite;  agregúese  ya  que  está  frita,  hari- 
na; déjesele  tomar  color;  muélanse  jitomates  asados  y  frían- 
se allí  mismo;  écheseles  pimienta  en  polvo  y  déjese  freir 
mucho;  ya  bien  frito  póngasele  caldo  del  mismo  en  que  se 
coció  la  lengua  y  mézclese  con  el  reesudo,  póngasele  chí- 
charos cocidos  y  déjese  secar  el  caldo.  Antes  de  apearlos 
anádsse  vino  tinto. 

640.  Lengua  de  puerco.— Se  echan  las  lenguas  á  cocer  en 
una  olla  con  sal,  partidas  en  rebanadas  y  cocidas,  se  quitan 
de  la  lumbre,  se  desvenan  dos  ó  tres  chiles  anohos  y  se  fríen 
en  manteca  cea  dientes  de  ajo -y  jitomates  molidos.  Échese 
todo  esto  en  una  cazuela  con  manteca,  dos  ó  tres  manojos 
de  cebolla  en  gajos,  y  cuando  esté  bien  frito  se  le  echa  la 


m 

carne  y  ton  poco  <le  caldo  en  que  te  cocieron  lae  lenguas. 
Be  muele  clavo*  canela  y  pimienta  y  seeha;  el  caldillo 'nía 
de  quedar  espeso.     Adórnese  con  chiles  y  aceitunas.' 

541.  Otra  — Se  rebanan' crudas,  se  echan  én  una:  cagúela 
con  bastante  jitomate  picado,  cebolla  y  ajo.  Sé  fríe  todo 
muy  bien  y  se  le  echa  agua,  perejil  picado,  orégano  y  to- 
millo; se  agrega  claro,  canela  y  pimienta;  El  caldillo  debe 
quedar  étfpeso.  Antes  de  servirla  fe  le  agrega  Tino  de  Jerez 
y  se  adorna  con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras.  '' 

542.  Otras  daveteada*. — Se  clavetean  las  lenguas  enteras 
con  jamón,  ajo,  pimienta  y  clavo;  se  echan  en  una  olla  con 
bastante  cebolla  rebanada,  tomillo  y  orégano,  Vinagré  dé 
Castilla,  un  tanto  igual  de  vino  carien  y  agua  con  sal  Mué- 
lase clavo,  canela  y  pimienta,  tápese  la  olla  á  que  no  se  eva- 
pore hasta  que  se  cueza  la  lengua.  Debe  quedar  él  caldo  es- 
peso y  se  sirve  con  aceitunas  y  chiles. 

543.  '  Piét  de  puerco  ahumados. — Después  de  limpios  se 
tendrán  por  tres  ó  cuatro  horas  en  sal  de  mar  y  un  poco  dé 
tequezquite.  Después  se  cuelgan  en  él  horno  y  se  enciende 
debajo  una  luminaria  chica;  cuando  esté  bien  encendida  se 
le  eoha  majada  seca  para  que  la  carne  reciba  todo  el  humo. 
A  las  dos  6*  tres  horas  se  ponen  á  cocer  enagua  limpia; cuan- 
do han. cocido  un  poco,  se  dejan  escurrir';  se  ponen  éfa  uilá 
tabla  y  se  les  pone  encima  mucho  peso  para  aprensarlos. 
Así  se  dejan  tres  6  cuatro  días  y  ya  quedan  buenos. 

544  Otros  m  escabeche. — Se  limpian  bien  y  sé  dejan  co- 
cer desde  la  noche  antes  del  dia  en  que  sé  hade  guisar,  que 
se  lea  quita  el  caldo  y  se  cubren  con  huevo  batido  como  si 
fuera  para  chiles;  se  fríe  ajonjolí  con  ajo  picado  y  cuando 
está  dorado  se  le  echa  agua  á  que  hierva  mucho,  y  los  pies 


171 

luego,  bizcocho  molido  con  clavo,  canela  y  pimienta,  un  po- 
co-da  azafrán,  vinagre  y  azúcar.  Aparte  se  hierre  lima  y 
hojaa  de  naranjo,  y  después  que  ha  dado  unos  hervores  se 
agrega  el  caldillo. 

546.  Otros. — Después  de  cocidos  se  deshuesan  y  con  sal" 
chicha  quitada  la  tripa  que  las  cubre  se  envuelven  en  reda- 
nos  de  puerco,  se  bañan  de  sal  y  pimienta,  se  pone  á  la  pa- 
rrilla y  cuando  está  cocida  se  sirven  con  un  pura  de  espinacas. 

546.  Otro», — Se  tuestan  chiles  anchos  y  se  desvenan,  se 
muelen  almendras,  avellanas,  pepitas  de  chile,  clavo,  ca- 
nela y  pimienta,  y  se  fríe,  se  echa  en  las  manitas  y  se  ponen 
á  cocer  en  sal. 

547.  Otros  pies  de  puerco  en  escabeche. — Se  fríen  estos  con 
hueros  como  chiles  rellenos.  Se  muelen  unos  bizcochos  re- 
cortados, i  que  queden  como  el  ajonjolí  para  pipián;  se  fríe 
en  manteca  un  poco  de  ajo  picado,  y  allí  mismo  se  fríe  él 
bizcocho,  se  le  echa  agua.,  clavo  y  canela  molida,  rebanadas 
de  lima  agria  cocidas,  vinagre,  hojas  de  lima  y  se  ponen  los 
pies  de  puerco  á  que  se  sazonen,  y  cuando  vayan  á  la  mesa 
se  le  pone  un  poco  de  ajonjolí  tostado. 

548.  Torta  de  pies  de  puerco. — Se  cuecen  y  deshuesan;  se 
pica  carne  de  puerco  como  para  picadillo,  se  muele  chile 
ancho,  cominos,  ajos,  pimienta,  clavos  y  canela,  fríase  todo 
junta  agregando  vino,  rinsgre,  aceitunas,  chiles  en  vinagre 
y  alcaparras.  Bátanse  dos  hueros,. embárrese  una  tortera 
de  manteca,  échese  la  mitad  de  los  huevos  batidos  y  el 
picadillo,  luego  el  resto  del  huevo  y  cuezase  á  dos  fuegos. 

549.  Guisado  de  pies  de  pf terco  ¡lomado  Casóla. — Se  cojen 
cuatro  pies  de  puerco,  otros  cuatro  de  carnero  y  dos  orejas 
de  puerco;  se  limpian  bien  y  se  ponen  á  cocer  con  sal;  ya 


172 

cocidas  se  pican  muy  bien  y  se  fríen  echándote»  canela  y 
asacar.  Se  balen  huevos  tai  proporción  como  pera  hacer1  una 
torta;  échese  en  ellos  el  picadillo  y  revuelvas*  bien.  -Éche- 
se en  una  tortera  embarrada  de  manteca  y  que  no  sea  ittuy 
entendida;  tápese  y  póngase  lumbre  en'  la  tapadera,  -'Itera 
ceñocer  que  ya  está  de  punto  métase  en  el  cen tiró  de' la' 'tor- 
ta un  popote  que  debe  salir  limpió. 

560.  Torta  de  piée  de  ptftft*.-*-J§é  lavan  y  limpian  muy 
bien  y  después  se  ponen  á  cocer  con  agua  y  sal.  Üná "  ves 
limpio?  se  pican  en  el  picador  como  si  fuera  otra? carne.  Se* 
cuecen  ohorizos  y  ohorizonesy  se  rebanan-,  se  fríen-  jitomsM 
tes  sin  pepita,  con  cebollas  y  perejil  muy  menudo;  y  se  de- 
ja refreír  mucho,  agregándole  clavo,,canela;'ptmieíita  y  nhas 

• 

hebras  de'astffran,'agua  y  sal.  Échense  los- pies  y  déjese 
hervir  hasta  «que*  se  consuma  el  agua.  Luego  sé  echan  los 
ohoriaós  y-ohornenes  rebanados;  se  cuece  un  betabel  y  un 
peoaso  de  nnahoria;  ambas  cosas  después  dé  cocidas' se  cor- 
tan en  pedacitos  y  se  echan  con  todo  lo  demás.  Se  deja  her- 
vir hasta  que  se  consuma  completamente;  se  baten  unos 
huevos  como  para  freír  y  se  echan  en  el  picadillo.  Aparte 
se  pone  una  sartén  con  manteca;  cuando  asta  se  frió  bien 
se  echa  en  ella  la  torta  que  se  pone  á  dea  fuegos  hasta  que 
cuaje;  cuando  ya  se  doró  se  pone  en  un*  platón  y  se  adorna 
con  lechugas  y  rebanadas  de  cebolla.  Al  picadillo  deben 
echársele  aceitunas  enteras  y  otras  picadas,  alcaparras  y 
chiles. 

551.  Pié»  de  puerco  empapelados. — Se  parten  á  lo  largo, 
se  ponen  á  cocer  la  víspera  con  un  trozo  de  mantequilla; 
al  día  siguiente  se  lavan  con  agua  caliente',  se  les  quita  el 
hueso  largo,  se  enjugan  con  un  trapo  y  se  les  echa  encima 


173 

sel,  clavo  y  pimienta  molida,  perejil  picado  y  pan  rallado; 
se  .toma  un  pliego  de  papel  florete»  te  embarra  de*  manteca, 
se  coloca  en  cada  papel  medio  pie*;  se  envuelve  como  em- 
panada, se  pone  á  la  parrilla  con.  bastante  lumbre  y  ae  yol- 
tea  hasta  que  truena  y  se  sirve  con  la  ensalada  siguiente: 
Ejotes  cocidos,  quitadas  las  hebras  y  partidos  á  lo  largo 
y  desuuee  de  escurridos  fritos  en  aceite  con  unos  dientes 
de  aja  machacados;  ya  fritos  se  sacan  de  la  sartén  y  se.  Jes 
agrega  cebolla  picada,  vinagre  y  sal 

552.  Pié»  de  cerdo. — Después  de  limpios  se  socarran  y  se 
ponen  á  remojo  una  noche,  al. siguiente  dia  se  onecen,  bien, 
y  después  se  les  quitan  loa  huesos  sin  hacerlos  muchos  pe- 
dazos; hágase  una  pasta  de  harina  y  de  huevos,  y  si  no,  pan 
rallado,  y  rebozados  se  fríen  en  aceite  ó .  manteca,  tapando 
)a  sarjen  6  cazuela  para  que  no  salten;  se  sirven,  con  azúcar 
y  canela,  j,  sisa  .quieren  servir  con  .salsa,  se  hace  una  de 
avellanas  que  se  deslíe  con  el  agua  donde  se  cocieron  los 
pies. 

.553.  Orejas  de  puerco  fritas. — Seles  quitan  los  huesos  y 
se  cuecen  con  una  parte  de  vino  y  dos  de  agua,  y  se  les  ha- 
ce un  adqt>p  con  pimienta,. ajos,  perejil,  tomillo,  lauvel,-  sal 
y  un  poco  de  vinagra»  si  se  quieren:  asi,  hay  que  servirlos 
muy  calientes;  para  freirse  se  rebozan. con  un  batido  de  hue- 
vos y  harina  y  un  polvo  de  azúcar. 

W4,,.  Orejarás  cerdo  Jrtiaj. -^Después  de  cocerlas  »y  corta- 
bas en  tiras,  se  echan  en  adobo,. como  las  de  la  ternera,  pa- 
ra, hacerlas  freir  igualmente. 

.,  555*  Orejas  de  cerdtoá  ¡a  leonesa*— En  una  salsa  de  cebo- 
llas hechas  pedazos  y.  pasadas,  por  manteca,  se  ponen  las 
otejas -cortadas  en  tiras,  se  añade  un  poco  de  harina,  samo- 


ni 

jan  con  caldo  y  M  reducen;  m  sirven  echan  V  unas  gotas  de 
vinagre,  6  el  jugo  de  un  limón,  y  si  se  quieren  con  rebana- 
da» de  pan  frítaa. 

556.  Oreje»  de  puerco  con  pan  rollado  atadae  en  pafrv 
lía.— Pónganseeobre  rescoldo  después  de  patadas  por  la  lla- 
ma, lavadas,  limpias  y  escaldadas;  cuando  están  tiernas  y 
frias-mótonseenpan  rallado,  mójense  en  huevos  batidos, 
vuélvanse  a  pasar  por  el  pan  rallado,  y  ásense  sohre  las  pa- 
rrillas; sírvanse  secas  6  con  jugo  claro. 

657.  CocWmffo  osado. -Mótose  en  un  caldero  de  agua  un 
peco  masque  tibia;  después  de  rotos  los  colmillos  Se  frota 
con  U  mano  para  quitarle  las  cerdas,  metiéndolo  y  sacando- 
lo  del  agua  varias  veces  basto  que  despenan»  todo  el  pelo; 
luego  se  le  quitan  las  peaunas,  se  le  «acá  el  vientre,  «didan- 
do de  no  quitarle  los  ríñones;  Hágansele  unas  cortáauras 
en  el  pescue»  y  otras  cuatro  en  el  loirto;  se  le  introduce1  el 
rabo  entre  cuero  y  carne;  reeójsiise'las  manto*  y  las  l»tos 
por  medio  de  dos  pesadores  de  hierro,  que  se  le  pasaran  el 
uno  por  los  muslos  y  eí  otro  por  el  pecho;  póngasete  en  se- 
guida  veinticuatro  hora,  en  agua  fría,  se  cuelga  y  W  deja 
aaoar;  rebócesele  el  vientre  con  hatina  amasada  en  manteo» 
,  póngase  en  el  asador;  mientras  esto  en  el  fuego  se  le  un. 
b/de  aceito  bueno  Con  «tas  plí.—.  Deanes  dé  quitado 
del  fuego  se  le  hacen  otras  incisiones  en  el  cuello." 

668V,CWWm«o  en  «Osx-^íe  corto  en  pedazos  mayores; 
después  de  asado  se  pssa  por  manteca,  y-hutaed^oon 
agua  ó  caldo,  se  añade  sal,  pimiento  y  un*  beja-de  hvrr**: 
después  se  hace  un  batido  de  yemas  dé-  huevo,  y  al  tiempo 
de  servirlo  se  roci*  con  sumo  de  limotí»  '  ■     _ 

559.  ChchtoiOorelUMenimidor.-D**»»  de  •*»"•*» 


175 

y  preparado  como  el  cochinillo  asado,  se  rellena  con  su  ntís- 
iuo  hígado  picado,  quitada  la  hiél,  jampa,  alcaparras,  an* 
choas,  yerbas  finas,. sazonado  todo  oon  pimienta  y  sal,  miga 
de  pan  empapada  al  fuego  en  manteca  ó  leche,  otro  tanto  de 
manteca,  miga  de  pan,  machacado  y  desleído;  esto  ultimo 
en  tres. yemas;  lleno  el  vientre  del  cochiniilo  con  estatúes* 
da,  se  Je  ata,  se  pone  en  el  asador  y  se  hace  lo  mismo  que 
con  el  precedente*  Se  le  sirve  acompañado  .de  una  salsa  a 
lape>re. 

660.  Cabeza  fie  cerdo.— Limpíese  escaldándola,  y  con  un 
cuchillo  se  quitan  los  huesos  sin  tocar  la  piel;  se  mete 
dentro  tocino  gordo  se  sazona  con  sal,  especias,  cebollas, 
perejil  y  ajos,  todo  bien  picado;  después  se  envuelve  en  un 
paño  y  se  pone  á  cocer  en,  una  sala*,  Iiethv.  con  vino  tinto, 
yerbas  aromáticas,  cebollas,  sal  y  pimienta;  después  se  sir- 
ve en  una  servilleta  sobre  un  platón. 

561.  Cabeza  de  jabalí.— Se  prepara,  guisa  y  sirve  en*un 
tocio  como  la  precedente. 

562.  Eiaado  de  puerco  á  lo  cazador. — Se  coloca  en  un 
platón  y  se  dividen  en  dos  pedazos,  sin  separarlos,  se  en- 
tienden en  el  pfaton  y  se  cortau  en  todo  su  espesor  sin  llegar 
a  dividir  los  pedazos.  Se  pica  juntamente  jaüion,  perejil  y 
unas  cebollas,  con  lo  que  se  cubre  la  superficie  del  hígado; 
luego  se  empolva  con  sal  y  pimienta  y  se  baña  con'aceite,  y 
se  deja  así  por  una  6  dos  horas.  Se  replegan  luego  ambas 
partes  del  hígado,  se  mephan  con  fonjasde  tocino  y  sé  po- 
nen en  una.  olla  á  que  cuezan  lentamente,  Cuándo  el  híga- 
do está  enteramente  cocido  se  retira  de  la  olla,  se  coloca  en 
un  platón  y  se  desengrasa  la  salsa.  Se  le  añaden  unas  cu- 
charadas de  jugo  y  unas  cuantas  gotas  de  vinagre  al  servir. 


176 

•663.  Hígado  de  puerco  ealUado. — Se  sofríe  en  manten 
cortado  en  tajadifaas  delgadas  de  igual  espesor.  Se  procura 
que  se  frían- por  arabos  lados,  y  hecho  esto  se  empolvan  con 
sal  meaclada  con  pimienta;  se  retiran  de  la  cazuela  en  cuan- 
to están  bien  -fritas  las  tajadas.  En  la  salsa  en  que  cocieron 
se  echa  un  puñado  de  yerbas  finas  picadas  con  cebollines; 
se  añade  media  ouoharada  de  harina,  unas  ouantas  cuchara- 
da» de  jago  y  un  poco  de  vinagre.  Cuando  la  salsa  está  de 
buena  consistencia,  se  le  echan  las  tajadas.de  hígado,  se  de- 
jan que  se  impregnen  bien  y  se  sirven  muy  calientes.    ' 


EMBUCHADOS. 

:     ■  •    i  ■ 

•  ■  *  •        • 

654.  Los  embuchados  de  la  carne  de  cerdo,  como  son  sal. 
chichas,  salchichones,  morcillas,  chorizos,  longaniza,  etc. , 
son  un  recurso  de  los  mas  apreciables  en  la  economía  domes- 
tica. Sus  especies  son  muy  numerosas  y  complicadas  en  to- 
dos los  países  por  la  variedad  dé  condimentos  con  que  se  pre- 
paran.  Nosotros  nos  ocuparemos  de  algunos  de  los  que  mas 
se  usan  en  nuestro  país. 

565.  Ave»  ó  morcillas. — Se  pone  en  una  cazuela  un  tanto 
de  sangre,  otro  de  gordura  picada  muy  menuda  y  otro  dé 
cebolla  y  tomate  también  picado.  Los  tomates  ée  enjuagan 
un  poco  para  que  se  les  quiten  las  pepitas.  Se  revuelve'  to- 
do  muy  bien  y  se  le  echa  un  polvo  de  chile  pasilla  tostado, 
un  pedazo  de  nuez  moscada,  almendras  peladas  y'  partidas, 
piñones,  cacahuates,  pasas  y  especias  molidas;  se  rellenan 
las  tripas  dejándoles  flojas,  se  ensartan  en  un  palo  y  sé  po- 


177 

nen  en  una  casuela  con  agua  hirviendo,  y  te  pican  con  un 
alfiler  para  que  no.  te  revienten* 

5G6.  Gnüado  d*  anea — Se  parten  crudas  y  :te  popen  á 
freír  con  sal;  te  parten  cebollas  en  pedazos  grandes,  una  ca- 
bera de  ajos  con  cascara  medio  molida,  un  poco  de  pimien- 
ta y  clavos,  todo  .molido,  chile  verdeen  pedazos  y  se  echa 
todo  en  la  cazuela  con  la  carne  á  que  se  fría;  ya  qué  están 
fritas  las  aves  se  le  echa  vinagre  y  lnego  agua  suficiente;  ha 
de  quedar  el  caldillo  espeso. 

5G7.  Morcillas,  — Re  pica  la  manteca  que  se  tomó  del  vien- 
tre en  pedazos  pequeños,  se  echa  en  un  lebrillo  grande,  y 
también  la  cebolla  picada,  sal,  pimienta,  clavillo  y  canela; 
se  amasa  todo  para  que  se  mezclen  bien  las  especias,  y  se 
ocha  la  sangre  poco  á  poco,  removiéndolo  con  un  cucharón 
de  madera;  hecha  la  mezcla,  se  fríe  un  poco  en  la  sartén 
para  observar  si  está  bien  preparada  y  sazonada,  y  si  no  es- 
tuviere, se  aumentará  la  sal  ó  especia  que  se' conozca  nece- 
sita, y  en  seguida  se  llenan  las  itfffrcillas,  dejándolas  al- 
go menguadas,  para  que  no*  se  revienten  al'  cocerlas;  es- 
ta operación  se  hace  en  una  caldera  grande  dispuesta  con 
agua  tibia,  en  la  que  se  echarán  las  morcillas  poco  á  poco, 
cuidando  que  no  estén  muy  apretadas,  y  ya  que  estuvieren 
todas  6  las  que  cómodamente  quepan,  se  pone  á  cocer  á 
lumbre  fuerte;  después  que  cuecen  un  rato  las  morcillas, 
se  les  pica  con  una  aguja  para  que  salga  el  aire  que  tuvie- 
ren dentro,  y  se  modera  un  poco  el  fuego;  cuando  al  picar- 
las no  salga  sangre,  es  señal  que  están  cocidas,  f-  sé  sacan 
con  cuidado  poniéndolas  en  un  lienzo  extendido  en  una 
mesa;  se  enjugan  con  otro  y  se  cuelgan  á  secar.  Deben  usar- 
se las  tripas  mas  anchas  del  intestino.     £1  caldo  es'  bueno 

LA  ÓOOIWSRA  POBLÁXA. — TOM."  I.— í¿ 


178 

para  sopa*  y  migas,  y  también  ¡mu»  hacer  torta*.  Alguno* 
echan  arroz  oooido  en  las  morcillas  en  ves  de  cebollas  y  loe 
demásjngredientes  que  heme*  dicho. 

568.  MorcxUa*  tdrtnuña*. — La  carne  de  la  degolladora 
del  cerdo  que  es  en  en  mayor  parte  gorda  et  la  qu-  te  em- 
plea en  estas  morcillas,  picándola  en  pedazo»  regulares;  ee 
adoba  con  aal  molida,  otiile  ancho  para  que  dé*  color,  un  po- 
co de  pimienta  en  polvo  y  otro  poco  de  orégano  pasado  por 
tamiz;  se  amasa  como  los  chorizos,  7  pasados  un  par  de  días 
se  desata  la  pasta  con  sangre  de  Taca,  embutiéndolo  todo 
en  intestinos  de  Taca  6  cerdo;  al  atar  las  morcillas  se  deja- 
rán menguadas  para  que  no  se  revienten  cuando  hayan  de 
usarse,  y  en  seguida  se  cuelgan  al  humo. 

669.  MoreiüoM  de  ctboüa. — Se  pican  algunas  cebollas  d al- 
oes, se  penen  en  un  lienzo  claro  y  se  dejan  escurrir  por  una 
noche;  poco  antes  de  hacerse  las  morcillas,  se  pone  á  cocer 
en  agua  y  sal  la  cebolla,  sin  tocarla  del  mismo  trapo,  y  al  sa- 
carla se  le  deja  escurrir  un  rata  Se  pican  bien  las  mante- 
cas que  se  sacan  del  menudo,  y  se  incorporan  con  la  sangre 
y  la  cebolla,  quedando  la  masa  algo  clara.  £1  aderezo  prin- 
cipal de  las  morcillas  es  la  sal,  pimienta  y  el  orégano.  En 
▼arios  puntos  afiaden  duloe  6  picante,  ajos  machacados, 
anís,  hinojo,  cominos,  culantro,  ajengibre  y  piñones  fres- 
cos; de  todas  estas  cosas  podrán  elegirse  las  que  sean  del 
gusto  de  quien  hace  el  adobo  y  estilo  del  país. 

Se  llena  una  larga  tira  de  intestino  de  cerdo  6  de  ternera, 
y  de  medio  en  medio  palmo  se  hacen  unas  ligaduras,  que 
cada  una  forma  una  morcilla,  y  se  cuecen  en  la  caldera 
preparad*  *1  efecto. 

670.  Morátia*  sabadeiai. — En  algunos  parajes  en  dónde 


179 

acostumbran  hacer  cecina  de  vaca,  para  la  provisión  del 
ano,  hacen  morcilla  con  la  sangre  y  gordura  del  animal, 
añadiendo  si  falta  ésta,  una  porción  de  la  de  oerdo.  Se  ado. 
ban  lo  mismo  que  las  antecedentes,  sin  faltar  el  pimentón 
dulce  y  picante.  A  este  embuchado,  que  se  hace  y  cuece 
como  el  anterior,  dan  en  Castilla  la  Vieja  el  nombre  de 
morcilla  sabadeño. 

671.  MorcUUu  catalana»  ó  butifarra  negra. — Mientras  se 
pican  las  carnes  del  cerdo  para  las  longanisas,  chorizos  y 
demás  embuchados  blancos,  se  van  poniendo  aparte  los 
exiremos  musculosos  de  las  carnes,  las  gorduras  sanguoias, 
venadas  y  nerviosas,  los  ríñones  y  demás  desperdicios  que 
no  son  de  provecho  para  aquellos;  estos  restos  se  pican  cru- 
dos con  un  poco  mas  de  manteca  que  la  que  tiene  el  menu- 
do, y  á  mas  con  los  bofes,  el  oorason,  el  vientre  y  restos  de 
cortezas  y  tripas,  cociéndolo  todo  de  antemano  y  añadien- 
do una  porción  de  sangre  de  modo  que  la  masa  quede  algo 
espesa.  En  Cataluña  solo  se  sazona  este  embuchado  oon 
sal  y  pimienta;  pero  quien  guste  puede  sazonarlo  con  las 
demás  especias  y  condimentos  que  suelen  ponerse  á  las  mor- 
cillas, pero  de  ningún  modo  la  cebolla.  Por  último,  se  ha- 
ce el  embuchado  en  tripas  de  ternera  6  de  oerdo  de  las  an- 
chas, las  que  se  quieran  guardar.  Este  embuchado  se  cue- 
ce como  los  demás  y  puede  guardarse  algún  tiempo. 

072.  Morcillas  tttremeñas. — Se  quita  el  suero  á  la  sangre 
del  puerco  y  se  echa  manteca  derretida,  oebolla  picada,  to- 
mates, yerbabuena,  tomillo,  orégano  y  especias  molidas;  se 
echa  una  taza  de  leche,  un  puñado  de  arroz  machacado,  las 
gorduras  de  las  tripas,  sal,  pasas,  almendras,  pifiones  y  nue- 
ces; se  bate  todo  para  que  esponje,  se  rellenan  las  tripas 


180 

muy  floja»  porque  luego  esponjan,  ae  sancochan  en  'agua  de 
laurel  y  no  se  pican  para  qué  no  se  sálgala  manteca. 

573.  Morcillas  muy  buena*. — En  la  cazuela  en  que  se  re- 
coje  la  sangre  al  degollar  al  puerco,  se  echa*  sal  y  se  está 
deshaciendo  la  sangre  hasta  que  se  enfria.    Se  pone  á  cocer 

•  •  • 

una  tasa  de  arros  con  poca  aguay  sal  á  que  quede  entero  y 
bien  cocido,  una  cantidad  regular  de  cebolla  picada  y  coci- 
da. Deápues  de  bien  escurrida,  dos  6  tres  cabezas  de  ajo 
asadas  y  molidas  con  cominos,  clavo,  pimienta  por  separado 
y  molida  en  seco,  un  poco  de  perejil  muy  picado,  seis  jito- 
mates regulares  bien  picados,  menos  de  una  tasa  de  toma- 
tes del  mismo  modo,  un  poco  de  yérbabuena  deshojada,  un 
poWo  de  orégano  de  China,  seis  chiles  anchos  tostado*  y 
despedazados,  la  gordura  de  las  tripas  muy  picada,  que  da- 
rá como  taza  y  media,  se  revuelve  todo  con  lá  sangre  y  se 
prueba.  Se  le  eoha  lo  que  le  falte,  se  tiene  en  infusión  dos 
horas;  ya  lavadas  las  tripas  se  van  rellenando  dejando  va- 
cio un  pedazo  para  que  no  queden  muy  apretadas.  Se  po- 
nen á  hertir  en~un  cazo  con  agua  de  laurel  muy  caliente,  y 
conforme  vayan  ooajando  se  van  picando  eon  un  alfiler  pa- 
ra que  les  salga  el  aire.  Puede  echársele  también  nueces, 
pasas,  almendras  y  pifiones. 

574.  Morcilla»  en  escabeche. — Limpias  las  morcillas  se 
echan  en  una  olla  con  aceite,  vinagre,  laurel,  tomillo  y  ca- 
bezas de  ajos  enteras.  Se  pbnen  en  la  lumbre  con  un  papel 
en  la  boca  de  la  olla  y  encima  una  cazuela  con  agua;  me  pro- 
cura menearla  para  que  no  se  queme  hasta  que  consuma 
todo.  Entonóos  se  pone  una  serien  con  bastante  aceite,  y 
cuando  está  bien  caliente,  se  le  agregan  muchos  dientes  de 
ajo  sin  pelar  y  se  apean  de  la  lumbre  así  que  empiezan  á 


181 

dorarte:  se  añaden  hojas  de  laurel,  tomillo,  pimienta  y  cla- 
vo entero,  sal  y  vinagre.  Se  tacan  las  morcillas  y  se  ponen 
en  una  olla  que  baya  servido  y  se  echa  allí  mismo  el  aceite 
con  que  se  han  guisado. 

676.  Sangre  de  puerco. — Cuando  se  degüella  el  puerco,  se 
coloca  debajo  de  la  herida  una  olla  de  boca  ancha  6  una  cu- 
beta de  madera  muy  limpia;  se  recoje  la  sangre  caliente;  se  le 
va  dando  vueltas  sin  cesar,  y  siempre  á  un  mismo  lado,  pa- 
ra evitar  se  corte  6  coagule;  recogida  la  sangre  se  pone  á 
cocer,  se  le  echa  la  sal  necesaria  y  especias  finas;  estando 
cocida  y  sazonada  puede  echarse  un  poco  de  azúcar,  sirvién- 
dose con  plátanos  frito*  maduros.  Para  evitar  que  la  san- 
gre se  corte  cuando  cae  de  la  degolladura,  pueden  echarse 
en  la  olla  6  cubeta  unas  pajas  de  maíz  y  es  bastante  para 
no  padecer  un  descuido. 

676.  Morcillas  de  $al,  cubana*.  — Se  preparan  las  tripas 
que  quieran  llenarse,  atándolas  con  una  cuerdecita  á  la  pun- 
ta; se  va  echando  dentro  la  sangre  de  puerco  cocida  con  las 
especias  molidas  y  tostadas;  añádeos©  algunos  trocí  tos  de 
carne  gorda  cortados  en  muy  pequeños  pedazos;  se  revuel- 
ve todo  esto;  después  de  llenas  se  les  ata  otra  cuerdecita  ala 
boca;  ponente  á  cocer  en  agua  de  sal;  y  catándolo  saqúense, 
cortándolas  en  pedazos;  se  fríen,  y  se  les  echa  salsa  de  ji- 
tomate frito. 

677*  Otra  morcilla  cubana. — Cuécense  ocho  6  diez  cebo- 
llas con  sal;  se  exprimen  bien;  se  sofríen  en  cuatro  onzas 
de  manteca;  piqúese  un  poco  de  tocineta  y  carne  de  ave 
asada;  mézclese  con  seis  yemas  de  huevo,  seis  ó*  siete  gra- 
nos de  pimienta  molida,  un  poco  de  pan  rallado  y  sal;  éche- 
se esto  á  sofreír  con  las  cebollas,  cuando  lo  esté,  se  saca  é 


182 

introduce  en  las  tripas  bien  limpies,  Atándoles  por  sos  dos 
extremos;  se  ponen  á  cocer  como  medie  hora,  y  cuando 
quieren  comerse,  se  asen  6  fríen  poniendo  la  salsa  qne  se 
apetezca. 

678.  Morcilla»  Maneo*. — Se  mezclan  pechugas  de  aves  y 
manteca  en  igual  cantidad,  picándolas  bien,  con  cebollas 
cortadas  en  pedacitos  cocidos  en  caldo,  sal,  especias  y  miga 
de  pan  cocida  en  nata;  se  vuelve  á  picar  todo  junto  para 
que  quede  bien  amalgamado,  añadiendo  yemas  de  huevo  y 
nata;  se  llenan  los  intestinos  y  se  cuecen  en  agua  con  mitad 
de  leche;  asf  que  está  en  punto  se  pican  y  se  ponen  i  tos- 
tar  en  una  cajita  de  papel  untada  con  manteca. 

579.  MarciüúB  á  la  francesa. — Se  cortan  cebollas  en  pe- 
dazos, se  pasan  por  manteca  derretida,  pero  no  de  modo 
que  tome  color;  se  pisa  con  ellas  una  libra  de  manteca  por 
media  azumbre  de  sangre,  mezclándolo  todo  y  añadiendo 
yerbas  finas  picadas  menudamente,  sal,  especias  y  nata. 
Con  esta  mezcla  se  llenarán  los  intestinos,  habiéndolos  an- 
tes limpiado  bien  por  medio  de  un  embudo;  se  atarán  por 
una  extremidad  y  se  llenarán  antes  de  poner  la  atadura, 
teniendo  cuidado  de  no  hacerla  demasiado  larga;  se  coce- 
rán en  agua  templada  hasta  que  al  picar  con  un  alfiler  no 
salga  ya  sangre.  Entonces  se  retiran  y  se  dejan  escurrir  y 
secar,  cortando  de  ellas  pedazos  mas  6  menos  largos;  ad- 
virtiendo que  no  debe  hervir  el  agua  porque  reventarían. 
Se  ponen  en  parrillas  6  en  asador. 

680.  Ghoriao*  á  la  franotaa.-rSe  toma  un  trozo  de  carne 
entreverada,  se  pica  con  oebolias,  perejil  y  un  poco  de  ajo, 
según  el  gusto,  sazonándolo  convenientemente;  con  esta 
mezcla  se  llenan  los  intestinos,  atando  sus  extremos,  y  se 


183 

ponen  al  humo  en  la  chimenea  por  algunos  días;  cuando  se 
hayan  de  comer  ae  cuecen  por  dos  6  tres  horas. 

581.  Choiizos  á  la  italiana. — Se  pica  carne  magra  de  cer- 
do con  una  cuarta  partí  de  tocino  ordinario,  y  se  sacona  con 
especias,  sal,  culantro  y  anís  en  polvo.  Sobre  esta  mezcla 
se  echa  vino  blanco  y  otro  tanto  de  sangre  de  cerdo  aún  ca- 
liente, haciendo  hebras  con  la  carne  de  la  cabeza  del  animal 
para  introducirlas  con  lo  demás  en  los  intestinos,  y  se  ata- 
rán á  un  tamaño  conveniente;  se  cuecen  y  ponen  al  humo. 

582.  Enbnchadosd  la  francesa. — Se  elijen  los  intestinos 
mayores  del  cerdo,  y  después  de  haberlos  lavado  y  tenido 
en  agua  fria  por  espacio  de  veinticuatro  horas,  se  dejan  es- 
currir y  secar;  se  dividen  á  lo  largo  con  la  carne  también 
cortada  de  la  misma  manera,  y  con  manteca  en  pequeños 
pedazos,  añadiendo  sal,  pimienta  y  plantas  aromáticas  ma- 
jadas, con  ouya  composición  se  llena  otro  intestino,  hacién- 
dolo del  grueso  conveniente.  Se  ata  por  ambos  extremos  y 
se  pone  á  salar. 

583.  Otroi  chorizones. — Se  ceje  una  arroba  de  carne  de 
puerco  de  lomo  6  espinazo,  una  libra  de  chile  ancho  remo- 
jado y  bien  molido,  media  libra  de  sal  y  una  cabeza  de  ajos. 

La  carne  y  el  chile  han  de  estar  bien  picados;  la  sal  y  los 
ajos  bien  molidos.  Se  revuelve  bien  con  un  poco  de  agua, 
se  deja  doce  horas  en  adobo  y  se  prueba:  se  le  agrega  lo  que 
le  falte.  Hecho  esto  se  rellenan  las  tripas  y  se  dejan  orear. 

584.  CKorix*. — Se  pica  la  carne  magra  en  pedazos  peque- 
ñitos  y  se  pone  en  un  lebrillo  grande;  se  adoba  con  sal  mo- 
lida, chile  picante  y  dulce  para  que  de*  buen  color,  orégano 
bien  molido  y  pasado  por  tamiz,  ajos  machacados  y  desleí- 
dos con  un  poco  de  agua:  se  amasa  bien  para  que  la  carne 


184 

se  impregne  con  el  adobo,  y  se  tiene  atí  tres  ó  cuatro  días, 
cuidando  de  removerla  una  6  dos  vece*  por  dia,  y  amatán- 
dola con  los  puños.  Trascurrido  el  tiempo  oportuno,  se  fríe 
un  poco  en  la  sartén  para  probar  si  está  en  buena  sazón  y  si 
tiene  buen  color,  aumentando  la  cantidad  de  los  ingredientes 
que  se  hubiere  notado  estar  escasos,  y  procurando  que  sobre- 
salga un  poco  el  picante;  puede  probarse  otra  rea  si  se  oree 
conveniente.  Ya  sazonada  la  carne  se  embute  en  los  intes- 
tinos de  vaca  6  de  cerdo,  que  son  los  mas  á  proposito,  pre. 
parados  de  antemano  con  una  infusión  de  orégano,  un  po- 
quito de  sal  y  agua  suficiente  para  que  los  cubra,  escurrién- 
dolos bien  cuando  han  de  usarse;  ya  que  están  llenos  se  atan 
de  trecho  en  trecho,  según  la  magnitud  que  quiera  darse  á 
los  chorizos,  colgándolos  en  seguida*  para  qué  se  oreen  6  po- 
niéndolos al  humo. 

586.  Chorizoncs  jerezanos, — Se  cortan  en  pedacitos  tres  li- 
bras de  lomo  de  puerco  y  dos  de  gordo.  Se  echa  la  carne 
en  una  cazuela,  se  muelen  veinte  chiles  anchos  y  dos  mano- 
jos de  ajos  pelados,  se  echa  en  la  carne  y  se  agrega  por  se- 
parado y  en  polvo,  canela,  clavo,  pimienta,  anís  tostado,  y 
vinagre  de  Castilla.  Después  se  revuelve  todo.  Se  deja  en 
infusión  tres  dias  meneándolo  con-  frecuencia.  Pasados  los 
tres  dias  se  fríe  un  poco  y  se  prueba  para  echarle  lo  que  le 
falte.  Se  rellenan  las  tripas  y  antes  de  amarrarlas  se  pican 
con  un  alfiler  para  que  salga  el  viento.  Se  cuelgan  sobre  el 
bracero  para  que  reciban'  calor  y  tan  poco  de  humo.  Deben 
estar  cinco  dias  y  después  se  cuelgan  en  un  lugar  fresco. 

686.  Chorizone$. — Se  parte  en  pedazos  chicos  la  carne  de 
puerco,  se  desvena  un  poco  de' chile  ancho  y  otro  poco  de 
chile  mulato  y  se  echa  á  remojar  en  agua  caliente,  después 


186 

se  lava  muy  bien  para  que  no  pique.  Se  muele  iodo  junto 
con  un  poco  de  pimienta  y  clavo;  se  baja  del  metate  con  vi- 
nagre de  Castilla  y  se  echa  en  una  cazuela;  se  agrega  á  la 
carne  picada  un  poco  de  orégano  de  España,  tomillo  y  anís 
entero,  la  sal  al  gusto  y  molida;  si  le  falta  vinagre  se  le  echa 
otro  poco.  Se  revuelve  todo  bien  y  se  rellenan  tripas  de 
vaca;  después  se  cuelgan  en  donde  suba  el  humo  que  han 
de  recibir  durante  tres  dias.  Después  se  ponen  al  aire  pa- 
ra que  se  acaben  de  secar,  evitando  que  les  dé*  el  sol. 

587.  Longanizas. — Sé  preparan  del  mismo  modo  que  los 
chorizos;  pero  no  se  echa  tanto  pimiento  picante;  además  se 
añade  un  poco  de  anís  cocido  en  vino  blanco.  Se  prueban 
para  saber  si  están  sazonadas,  y  se  embuten  como  hemos  di- 
cho de  los  chorizos. 

588.  Longaniza  basta. — Se  pican  bofes,  lengua,  corazón, 
ríñones  y  tocino  de  la  degolladura,  se  echa  pimienta  y  sal, 
se  embuten  y  cuelgan  para  que  se  enjuguen. 

589.  Longaniza  habanera. — Prepárese  un  adobo  compues- 
to de  vinagre,  orégano,  sal,  pimienta  molida,  culantro  ma- 
chacado, ajos  picados  y  cuatro  hojas  de  laurel ;  se  echa  la 
carne  de  puerco  que  sea  de  masa  ó*  lomo,  sé  deja  tome  bien 
el  gusto  del  adobo,  y  estando  como  hora  y  media,  se  pica  la 
carne  en  menudos  pedacitos,  se  echa  en  las  tripas,  y  se  van 
atando  como  de'  ocho  en  ocho  dedos  regulares.  Este  embu- 
tido se  sirve  siempre  friendo  las  longanizas. 

590.  Longaniza  cubana. — Adobada  la  carne  de  puerco  co- 
mo se  ha  expresado  anteriormente,  se  toman  y  pican  unas 
cebollas  que  estén  cocidas,  un  poco  de  perejil,  especias  finas 
machacadas  y  un  poquito  de  ajo;  se  echa  este  relleno  en  las 
tripas,  y  se  sirven  asadas  6  fritas. 


186 

591.  Lonyaniaa  de  FidL— Se  elijo  carne  magra  de  hebras 
y  solomillo*,  se  corta  menudito,  sin  picarla,  se  le  pone  sal 
y  pimienta  negra  molida,  se  llenan  las  longanizas  lo  mas 
apretado  posible  en  intestinos  gruesos  de<oerdo,  se  cuelgan 
en  paraje  freseo  y  ventilado  hasta  que  estén  secas,  y  enton- 
ces se  guardan.  * 

592.  Sobrtamxda  de  Mayorca. — La  preparación  de  esta  es 
muy  semejante  4  la  de  los  chorizos;  su  masaos  entreverada 
y  unos  la  pican  muy  menuda  y  otros  no  tanto.  Se  saaona 
solo  con  el  pimentón  dulce  y  picante.  Se  dejan  largas  como 
longaniza*.  Se  les  hace  4  cada  uno  dos  6  tres  atadura*,  pe- 
ro de  modo  que  no  lleguen  á  dividirlas,  oerrando  el  intesti- 
no como  en  las  morcillas.  8e  llenan  muy  apretadas,  y  no 
suelen  ahumarse.  Se  comen  asadas  cuando  fresca*,  y  cru- 
da* estando  secas,  y  en  el  puchera 

593^  Salchichas. — liquidando  la  salsa  con  algunos  huevos 
batidos,  con  azúcar  6  sin  él;  pero  se  la  sazona,  á  mas  de  la 
sal,  oon  clavillos  y  canela  en  polvo;  la  carne,  que  tendrá 
bastante  gordo,  será  muy  picada  para  que  con  los  huevos 
forme  una  masa  homogénea  y  bien  unida.  Algunos,  para 
hacerlas  ma*  exquisita*,  la*  añaden  un  poco  de  nata  6  mi- 
ga de  pan  empapada  en  nata  de  leche. 

Ésta*  salchicha*  *on  para  oomerae  pronto. 

594.  Salchicha  bada» — Se  pica  carne  entreverada  de  ma- 
gro y  gordo,  hasta  que  quede  hecha  pasta,  *e  adoba  como 
lo*  chorizo*,  anadiando  un  pono  de  pimienta;  pero  el  chile 
picante  *e  pone  en  corta  cantidad. 

595.  3alchickaftna;*—Ij*  oarne  del  aolomiUo  e*  la  mejor 
para  Ja*  salohiehaa,  porque  e*  la  ma*  tierna;  se  pica  perfec- 
tamente oon  la  cuchilla,  se  echa,  sal,  pimienta,  un  poquito 


187 

de  clavillo,  canela,  todo  bien  molido  7  pasado  por  tamiz, 
7  un  poco  de  vino  generoso;  se  amasa  bien,  dejándolo  en 
tal  estado  por  tres  6  cuatro  dias,  7  después  se  embute  en 
intestinos  estrechitos,  que  por  lo  regular  suelen  ser  de  car- 
nero, se  atan  dándolas  la  longitud  que  se  quiera,  7  se  ponen 
á  secar  al  aire  en  paraje  fresco. 

596.  Salchichas  aromáticas, — Se  hacen  mojando  la  carne 
picada  con  un  poco  de  vino  blanco  locoroso,  un  polvo  de 
clavillo,  canela  7  nuez  'moscada.  Estas  deben  ser  de  ma- 
gro solo. 

697.  Salchicha  blanca. — Se  pica  la  carne  con  otro  tanto 
de  tocino,  añadiendo  sal  7  especias,  se'  introduce  después 
todo  en  los  intestinos,  7  se  atan  á  las  distancias  que  se 
quiere. 

698.  Butifarra  — Se  prepara  del  mismo  modo  que  la  sal- 
chicha, 7  se  embute  en  intestinos  mas  anchos;  después  se 
cuece  7  se  pone  á  secar  para  comerla  fria. 

599.  Salchichón. — Se  pica  muy  menuda  la  carne  del  solo- 
millo que  es  la  mas  á  proposito  por  ser  la  mas  tierna,  se  ado- 
ba con  sal,  pimienta  molida,  (algunos  la  echan  entera),  un 
poco  de  clavillo,  canela  7  vino  de  Málaga  ú  otro  equivalen- 
te, se  amasa,  se  prueba  7  se  embute  en  intestino  ancho  de 
cerdo:  se  pone  á  orear  por  unos  dias,  7  después  se  aprensa 
entre  dos  tablas,  poniendo  peso  encima  6  de  otro  modo,  se- 
gún parezca  conveniente;  cuando  está  bien  seco  se  conser- 
va en  paraje  fresco. 

600.  Dt  otro  modo. — Se  elegirá  la  carne  magra  7  corta 
del  cerdo,  se  añadirá  la  mitad  de  su  peso  de  hebra  de  vaca 
7  la  mitad  de  tocino,  que  se  cortará  á  pedazos  mientras  se 
pican  juntas  las  otras  dos;  se  sazona  echando  cinco  onzas  de 


188 

sal  por  cada  seis  libras  de  carne  preparada,  pimienta  moli- 
da y  quebrantada  y  tres  octavas  de  nitro,  cuyo  conjunto  ae 
mezclará  lo  mejor  que  se  pueda.  A  la  mañana  siguiente  se 
llenan  los  intestinos  de  vaca  ú  otros  mas  gruesos  de  vaca 
que  pueda  haber,  machacando  bien  la  carne  con  un  maco 
de  madera,  y  cuando  estén  bien  llenos  se  atarán  fuerte- 
mente: se  ponen  en  una  caldera,  dejándolas  que  se  bañen 
con  sal  mezclada  con  una  parte  igual  de  nitro  por  espacio 
de  ocho  dias;  después  se  sacan  al  humo  y  se  bañan  con  he- 
ces de  vino,  en  que  se  haya  hervido  salvia,  tomillo,  laurel 
y  albahaca.  Guando  estén  secos  se  envuelven  en  papel  para 
conservarlos  en  ceniza. 

QOh  Salchichones. — Se  toma  una  arroba  de  carne  de  puer- 
co y  se  pica  bien,  se  le  echa  un  puño  de  mejorana,  tomillo, 
arros,  bojes  de.laurel,  ajengibre,  núes  moscada,  orégano,  pi- 
mienta, clavo,  canela,  tres  cuartillos  de  vino,  sal,  y  se  deja 
en  infusión  de  un  dia  para  otro.  Se  rellenan  tripas  de  toro 
bien  limpias  y  se  amarran,  se  cuelgan  y  se  dejan  secar. 

602.  Salchichón  4  la'catalana  ó  butij arra  blanca. — Se  to- 
ma carne  de  cerdo  entreverada,  se  pica,  se  sazona  con  sal  y 
pimienta;  algunos  añejen  clavillo,  a  jengibre  y  núes  mosca- 
da, pero  no  es  lo  mas  cqmun,  .Se  llenan  intestinos  anchos 
de  cerdo  ó  de  .vaca,  y  se  cuecen,  en  la  caldera^, y  estando  co- 
cidos se  cuelgan  para  sacarlas.  Suele  hacerse  también,  este 
salchichón  con  la  carne  magra,,  y  entonces  se  le  dá  el  nom- 
bre de  butifarra  magra. 

603.  Butifarra»  catalana*. — Se  toma  carne  de  lomoy  par- 
te de  gordura  de  la  falda  para  que  no  salga  seco  y  se  pica 
muy  bien.  Para  cada  libra  de  carne  se  echa  una  onza  de  sal 
y  una  cuarta  de  onza  de  pimienta.  Se  mezcla  y  ae  rellenan 


1» 

las  tripa*  no  muy  apretada*  para  que  no  revienten;  ge  pícan 
para  que  los  salga  el  aire  y  tío  pueden  echarse  en  la'olla  si 
no  cuando  el  agua  está  hirviendo  á  borbotones;  se  tienen 
darán  te  media  hora  poco  mas  6  menos  y  se  pican  con  fre- 
cuencia estando  cm  el  agua  para  que  arrojen  toda  la  mante- 
ca sobrante;  se  conocerá  que  están  cocidas  cuando  al  .picar- 
las no  cfohen  un  caldillo  blanco»  qoe  es*)  que  arrojan  cuan- 
do empiezan  á  cocer;  entonces 'se  sacan  y  dejan  escurrir, 
colgándolas  de  modo  que  no  se  rocen  una  con  otra.  Pueden 
comerse  de  este  modo  y  son  excelentes;  también  pueden 
comerse  friándolas  en  una  torta  de  huevos  ó  solas;  si  se 
echan  en  el  puchero  hacen  un  buen  caldo. 

604.  Chorizo»  Manco*.  — -Se  muele  clavo,  canela,  pimienta, 
almoraduj!,  laurel  y  orégano  fino;  se  pica  carne  que  no  ten- 
ga mucha  gordura  y  se  pasa  por  ¿el  metate,  echando  para 
cada' libra  de  carne  un  cuartillo  de  vino  de  Jeras v*e  revuel- 
ve todo  y  se  rellenan  las  tripas;  se  pican  con  un  alfiler,  se 
echan  en  agua  caliente  y  se  dejan  hervir. 

605.  Oíros.—-  Para  media  arroba  de  carne  de  puerco,  lo- 
mo y  maciza  por  mitad,  se  echan  tres  libras  de  gordura  *e 
pica  la  carne  menuda,  se  pone  una  libra  de  chile  ancho  la- 
vado y  molido,  seis  onzas  de  ajos  limpios,  una  ochava  de 
cominos  y  sal  al  gusto:  ae  revuelve  con  dos  cuartillos  de  vi- 
nagre de  yema  y  uno  de  vino  de  Jerez:  se  deja  en  infusión 
por  doce  horas,  y  á  otro  dia  se  le  echan  especias  en  polvo, 
una  onza  de  canela,  una  de  clavo,  otra  de  pimienta  y  una 
nuez  moscada  grande:  se  revuelve  todo  muy  bien  y  se  deja 
por  tres  ó  cuatro  horas:  con  esto  se  rellenan  las  tripas  de 
toro,  dándoles  un  tamaño  regular:  se  cuelgan  arriba  del 
brasero  para  que  sequen  y  no'se  olisquen. 


190 


CONEJO. 


006.  Conejo  en  tecabeche. — Se  destripa  y  te  pone  á  oooer 
con  iodo  y  piel  en  un»  olla:  te  le  cenan  raboe  de  eebolla, 
ajoe  machacado»,  orégano,  tomillo,  laurel,  tal,  vinagre  co- 
rriente pero  de  buena  date  7  agua;  ya  que  está  cocido  se  pe* 
la  y  parte  en  raciones.  Se  echa  en  una  sartén  bastante  acei- 
te y  un  poco  de  manteca,  mucho  ajo  machacado,  orégano 
verde,  tomillo,  laurel,  y  se  frie  oon  todo  esto  á  que  entiese 
un  poco;  cuando  está  frito  se  le  vuelve  á  echar  de  todo  á 
que  se  sanooche;  se  le  agrega  clavo,  canela,  pimienta,  ajos 
asados  y  cominos,  todo  molido  sin  agua,  sino  con  vinagre. 
Se  le  hace  dar  un  hervor  y  luego  se  baja  del  brasero  y  se 
pone  en  una  olla  ya  usada -una  capa  de  carne  y  otra  de  re- 
caudo. Cuando  ya  se  acomodó  todo  se  le  agrega  medio  ouar- 
tillo  de  buen  aceite  y  medio  de  vinagre  de  Castilla  y  sal;  se 
tapa  la  olla  con  otra  pegando  los  bordes  oon  levadura  y  se 
pone  sobre  el  brasero  ma$  no  tabre  la  lumbre  á  que  reciba 
simplemente  el  calor.  A  los  dos  días  se  destapa  para  ver  si 
tiene  suficiente  sal  y  si  lo  cubre  el  aceite  y  vinagre;  si  le 
falta  se  le  agrega  el  neoesario,  se  vuelve  á  tapar  y  se  deja 
así  por  ocho  dias  pasados  los  cuales  puede  comerse. 

007.  Quitado  de  conejo, — Se  pone  á  hervir  el  conejo  pa- 
ra quo  no  le  quede  pelo;  una  vez  limpio  se  parte  en  ra- 
ciones y  se  frie  en  manteca,  se  saca  y  en  la  misma  manteca 
se  frien  unos  dientes  de  ajo  molido,  pimienta,  clavo  y  ca- 
nela también  molidos;  se  vuelve  á  echar  en  la  manteca  con 
un  poco  de  agua  y  para  que  espese  se  frien  unos  pedazos  de 
pan,  se  muelen  y  agregan  al  guiso. 


191 

608.  Otro. — Se  pie»  bastante  oebolU  y  ajo,  se  parten  unat 
tirítat  de  jamón  7  m  fríe  todo;  ee  despelleja  el  conejo,  se 
hace  pedazos  en  crudo,  se  fríe  con  lo  dicho  antes,  se  le  agre- 
ga agua,  clavo,  canela  7  pimientos  molidos,  tomillo,  laurel 
y  orégano;  se  espesa  con  pan  frito  molido  7  al  servirlo  se  le 
pone  aceite  7  chiles  en  vinagre. 

609.  Otro. — 8e  cuece  el  conejo  con  paja  7  se  lava  con 
agua  caliente;  se  cuecen  tomates,  se  deshacen  7  fríen  con 
ajos,  cebolla  picada,  bastante  orégano  7  especias  molidas. 
Pero  antes  de  apearlo  de  la  lumbre  se  le  echa  aceite. 

610.  Otro  di  conejo. — Ta  limpias  las  raciones  se  echan  en 
manteca  en  una  cazuela  7  se  pone  la  carne  con  pedazos  de 
jamón,  cebolla  picada,  ajos  7  chorizos;  se  fríe  7  se  le  echa 
agua,  tomillo  7  orégano;  se  muele  clavo,  canela,  pimienta  7 
un  pedazo  de  pan  frito,  se  mezcla  con  lo  anterior  7  se  deja 
sazonar;  al  ir  á  servirlo  se  le  rocía  con  vino  carlon  7  se  ador- 
na con  aceitunas,  chiles  7  alcaparras. 

611.  Otro  con  $u  hígado. — Se  despelleja  la  liebre  6  cone- 
jo, se  corta  en  pedazos  7  se  echa  en  una  oila  nueva  con  bas- 
tante jitomate  picado,  cebolla  picada  7  otra  en  gajos,  cabe- 
zas de  ajo  enteras  7  peladas,  sal,  pimienta  entera,  media  li- 
bra de  jamón  rebanado,  medio  cuartillo  de  vinagre  7  una 
mitad  de  aceite;  se  asa  aparte  el  hígado,  se  muele  7  deja 
en  vinagre  7  luego  se  echs  en  la  olla;  se  tapa  bien  con  un 
papel  de  estraza  7  una  cazuela  con  agua  que  se  pone  encima; 
se  pone  á  fuego  manso  sacudiéndola  de  cuando  en  suando 
para  que  no  se  queme.  Se  adorna  con  rebanadas  de  pan 
frito. 

612.  Conejo  guisado.  —Desollado  7  limpio  sin  mojarlo,  se 


1M 

cotia  en  pedazo*: y  te  pone  en  !a  olla  ¿cartela  oon  aceite 
crudo,  perejil,  Üjoe  y  pimienta  para  que  se  rehogue  á  fuego 
lento;  se  añade  con  *¿ua «aliente,  7  cuando  esté  á  medio  co- 
cer té  echan  unas  hojaa  de  laurel,  clavillo  y  un  polvo  de  ca- 
nela: con  una»  alcaparral  ó  re  jai  de  lima  estará  muy  buena 

613.  Picadillo  de  conejo, — Quitados  los  huesos  y  memora» 
ñas  al  oonéjo,-«e  pica  ló  que  quede  muy  menudo;  *n  segui- 
da se  rehogarán  en  manteca  los  huesos  machacados  con  des- 
pojo de  ternera,  tocino  magro,  sal  y  pimienta,  polvoreándo- 
lo todo  con  nn  poco  de  harina.  Menéese  bien  y  échesele 
leche,  y  así  que  haya  hervido  durante  una  hora,  se  saca  y 
pasa  por  tamil,  y  .se  reduce  á  la  consistencia  de  oocido, 
poniendo  con  él  el  picadillo,  que  te  ealajitani  solamente. 

614.  Conejo  en  frícate. — Despellejad*,!  vaciado  y  limpio, 
córtese  en  pedasos;  póngase  en  una  .cacerola  un  buen  peda- 
so  de  mantequilla  fresca,  por  la  que  se  pasarán  pedasos  cua- 
drados de  tocino;  retírense  en  seguida;  pónganse  dos  cucha- 
radas de  harina  en  la  manteca,  y  amásese. 

615.  Conejo  en  escabeche. — Quítense  los  huesos,  y  mecha- 
dos con  tocino  y  jamón  crudo,  se  cierra  y  ata  con  hilo; 
se  deja  rehogar  con  aceite,  tomillo  y  laurel,  y  cuando  no 
desprenda  zumo,  se  retira  y  escurre,  cortándolo  en  pedaá- 
tos  pequeños,  pero  que  puedan  entrar  por  redomitas  de  bo- 
ca ancha.  Cuando  np  quepan  mas  en  una  de  éstas,  se  llena 
de  aceite  y  tapa  <?pn4  up 1  pergamino,  mojado;  puede  conser- 
varse de  este  modo  mucho  tiempo.  Se  sirve  en  ruedas  con 
perejil  pioado.jr  aceite. 

616.  Croqueta»  de  conejo. — Picada  la  car  e  con  tocino, 
sal,  pimienta,  menudillos  de  ternera  y  algo  de  harina,  se  ha- 


193 

cen  porciones  pequeñas,  y  estas  se  envuelven  con  migas  de 
pandee  remojan  en  huevo  batido  y  se»ks.yuelve  á  poner  pan; 
fritas,  se  sacan  á  la  mesa.    . 


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617..  Liebre  á  Za'auet  a.  — Después  de  quitada  la  piel  y  va- 
ciada, córtese  por  miembros;  si  tiene  sangre  póngase  aparte. 
Hágase  derretir  en  la  cacerola  manteca,  póngase  al  fuego, 
añadiendo  un  pujado  de  harina;  cuando  la  masa  esté  hecha 
óchese  la  liebre,  mojándola  con  suficiente  cantidad  de  vino 
tinto  y  mitad  de  agua;  sazónese  con  sal  y, pimienta;. póngan- 
se también  pedaoitos  cuadrados  de  tocino  y  cebollas  peque- 
ñas. Cuídese  de  espumarlo  y  desengrasarlo;  cuando  la  lie- 
bre esto  cocida  póngase  en  el  platón,  y  .si  la  salsa  está  de- 
masiado, clara  redúzcase,  espesándola  con  la  sangre  de  la 
liebre  y  su  hígado,  machacados  juntos,  sirviéndose  de  ello 
como  las  salsas  ordinarias» . 

618.  Liebre  en  asador. — Vacíese  y  limpíese  bien  una  lie- 
bre, de  la  que  se  recojerá  la  sangre;  córtensele  las  patas  de 
dejante,  de  modo  que  no  quede  mas  que  Ja  parte  trasera 
llamada  lomo,  que  se  mechar^,  oon  .tija*  de  tocino,  y  .se  po- 
ne en. el  asador  cerca  de  una.  hora.  Jpuando  esto  oooida  se 
servirá  con  una. salsa  hecha. con  el  hígado  .machacado,  que 
se  rehogará  en  manteca^con  ajetes,  picados,  mojándolo  oon 
caldo  y  vino  blanco;  añádase  también  sal,  pimienta,,  vina- 
gre y  su  sangre  misma.         /♦..,.. 

,619. .  Liebre  en  estofado  á  la  t$pa&ola.~-Q*  pajrte>  en  peda- 
zos, jw. limpia  con  una  servilleta  y., se,,  ppne*n  Miiaíon.',en 

la  eocurniA  poblana. — tom. — l  13 


194 

riño  blanco  dorante  ocho  6  diez  hora*,  te  saca* se  reboga 
con  cebolU  frita  en  aceite,  se  echa  después  pimienta  y  cla- 
vo y  se  le  afiade  todo  el  Tino  en  qne  estuvo  en  infusión  y 
algunas  hojas  de  laurel.  Después  de  cocida,  se  le  quitan 
las  hojas  de  laurel  y  se  sirven. 

620.  Liebre  en  estofado  á  la  francesa. — Limpia  y  quitados 
los  huesos  se  pone  á  fuego  lento  en  una  cacerola  con  sal, 
pimienta,  zanahorias,  cebollas,  perejil,  caldo  y  vino  por 
mitad,  se  echan  también  todos  los  huesos  y  media  mano  de 
ternera,  se  ponen  lonjas  de  tocino  por  encima  y  por  deba- 
jo; cocido  todo  se  separan  los  huesos,  se  pasa  por  tamiz  el 
caldo,  se  deja  que  el  frito  lo  congele  en  un  platón,  y  parti- 
do á  pedacitos  se  sirve  con  la  liebre. 

621.  Liebre  guisada. — Después  de  limpia  se  corta  en  tro- 
zos, que  se  ponen  en  una  cazuela  6  cacerola  con  aceite,  sal, 
pimienta,  ajos,  unas  hojas  de  laurel,  nuez  moscada  en  pol- 
vo, y  cuezase  con  fuego  debajo  y  encima  durante  un  cuarto 
dé  hora.  Quítese  la  mitad  del  aceite:  agregúese  perejil  pi- 
cado y  sepárese  el  laurel  y  los  ajos.  Espósese  la  salsa  con 
manteca  frita  y  harina,  el  jugo  dé  un  limón  y  sírvase. 

622.  Liebre  guisada. — Se  parte  en  trozos  y  se  pone  á  re- 
mojar en  vino  blanco,  después  se  fríe  con  manteca  6  tocino, 
y  cuando  esté*  se  pasa  á  un  puchero,  echando  especias;  dos 
dientes-de  ajo  machacados  y  sal;  con  hv  grasa  que  quedó  se 
fríe  cebolla  menuda  y  se  echa  á  la  olla  con  él  vino  en  que 
estuvo  á  remojo  la  liebre;  es  preciso  que  cueza  lo  menos  un 

•  par  de  horas. 

623.  Gazapo  g%tisado.—8e  fríe  con  pedacitos  de  tocino  y 
un  polvo  de  sal,  luego  sé  pone  en  la  olla  que  se  rehogue, 
para  servirlo  con  la  siguiente  salsa:  se  machacan  unas  ave- 


195 

llanas  tostadas  ooh  un»  rebanad»  de  pan  mojado,  dientes 

*»'•■  • 

de  ajo,  perejil  y  especias,  procurando  que  el  conjunto  no 
salga  muy  espeso, 

624.  Gazapo*  en  ékkharos.  — Córtense  y  empiécense  á  com- 
poner como  en  el  fricase*,  pero  sin  echarles  caldo  ninguno; 
cuando  estén  un  poco  mas  que  rehogados,  fanádanse  chí- 
charos nuevos  y  cuezase  todo  junto;  quítese  el  manojo  de 
perejil  antes  de  servirlos. 

635.  Atado  de  venado. — Se 'pone  un  poco  de  manteca  en 
una  casuela  y  se  le  echa  la  carne  con  labial  necesaria  y  dos 
6  tres  ajos  machacados,  un  poco  de  vino  de  Jerez,  hojas  de 
laurel  y  granos  de  pimienta;  se  pone  en  ,el  horno  después 
de  sazonarla  por  dentro  y  por  fuera  y  agregarle  papas/pe- 
ladas en  cruda 

626.  Ouiso  de  venado. — Se  corta  la  carne  J¥fcq*¿#99*tJt  Ufe 
echan  en  una  casuela  con  pimienta,  ajo,^^ganek  ¿solido, 
manteca  y  la  agua  necesaria  para  que  #*£»»  Cuando  le 
falte  ya  poco  á  la  carne  para  estar  blanda,  se  destapa  la  ca- 
zuela para  que  seque  y  no  quede  mas  que  una  saja»  regular. 
Al  apartarle  de  la  lumbre  se  le;  esprime  un  limón  6  una  na- 
ranja agria. 

'627.  Co*titta$,de  venado. — Después  de  preparadas  se  me* 
chan  'con  lonjas  de  jamón  y.  se  onecen  con  dos  cuoharadas 
de  caldo,  cebollas,  un  ramillete  y.  ruedas  de  zanahoria,  po- 
niéndolas á  dos  fuegos.  Después  de  cocidas  se  dejará  ique 
formen  jaletina  y  se  sirven,  rodándolas  con  una  salsa  ni- 
cante.  ... 

628.  Quito  d¿  venado. — Solo  se  emplea  el  pecho  y  la  es- 
paldilla. Se  hace  un  rojo  de  salsa  como  se  indio» , en  la  pá- 
gina 52,  en  el  que  se  echa  un  poco  de  azúcar  en  polvo;  hu- 


196. 

^  • 

medézcase  con  agua  y  échete  en  él  la  carne  hecha  trozos, 
cebollas  tiéinfas  menudamente  picadas,  un  vaso  grande  de 
vino  ti  Ató1,  jamón  partido  én  pedacitos  cuadrados,  sal,  un 
polvo  de  pimienta  y  tomillo;  se  hace  cocer  todo  y  al  tiem- 
po de  servirle  se  le  quítala  grasa  y  se  sirve.  Cuanto  mas 
oscura  quede  la  salsa  mas  gustosa  será. 

629.  EtpatiHüá  ck  venado. — Se  deshuesa  enteramente  y 
se  separa  un  poctf  de  su  carne  con  objeto  de  hacer  con  ella 
el  relleno,  para  lo  cual  se  picará  muy  menudamente  con 
otro  tanto  de  jamón  y  un  poco  de  miga  de  pan  empapada 
én  caldo  y  ya  seca.  Se  muele  todo  junto  añadiéndole  un 
huevo,  y  pobo  después  otro  sin  dejar  el  molido;  sazonándo- 
lo con  pimienta,  nuez  moscada,  sal,  perejil  y  cebollas  tier- 
na* picadas.  Guando  esté  perfectamente  mezclado  se  exten- 
derá la  espaldilla  polvoreándola  con  un  poco  de  pimienta  y 
S*i  jl  áyWstfgmy e  por  encima  una  capa  de  relleno  y  algu- 
nas tírfb  AffjHftto.  Hecho  esto  se  arrollará  y  atará  por  loa 
dos  extremos  eflmYr si  fuere  un  grueso  salchichón,  colocán- 
dola en  una  cazuela  en  cuyo  fondo  se  Hayan  puesto  zanaho- 
rias, un  Tamilléte  compuesto,  los  restos  y  despojos  del  des- 
hueaamiento^  tííédia  botella  dé  vino  blanco,  un  poco  de  sal, 
dos  clavos  de  especia  y  dos  dientes  de  ajo.  Se  cubre  con 
un  papel  untado  en  manteca  y  se  hace  cocer  dos  horas  "á 
dos  fuegos;  sé  saca  el  caldo  inclinando  á  un  lado  la  cazuela 
i  que  sé  vacie,  se  hace  un  rojo  dorado  y  se  embarra;  sis 
desata  la.  carne,  se  extiende  y  se  rocía  con  la  salsa. 

69O.'0iris(U¿o  de  cabrito.  —Se  escalda  un  cuarto  dé  cabri- 
to. En  una  cazuela  se  echa  un  trozo  de  manteca  y  una  cu- 
charada, de  harina;  curtfláo  e^ta  se  disolvió  bien  se  le  van 
echando' pecó  apoco  dos  d  tres  vasca  de  agua  hirviendo,  á 


197 

fin  de  que,  ya  clara  y  bien  mezclada,  se  ponga  dentro  el 
cuarto  de  cabrito  sazonándolo  con  pimienta,  sal,  un  ramille- 
te guarnecido  y,  cebollas  tiernas;  hágase, cocer  y  media  hora 
antes  de  servirlo  desengrásese  |a  manteca,  espásese  con  una 
yema  de  huevo  y  presan  tese  ala  mesa, 

631.  Otro  empanado, — Se  mecha  con  Ion  j  i  tas  de  jampn 
gprd»  por  el  lado  de  la  piel,  se  envuelve  en  un  papel  untado 
con  manteca  y  se  ensarta  en  el  asador.. .  Cuando  está  casi 
cocido  se  aparta  del  fuego,  se  quita  la  cubierta,  se  polvorea 
con  sal  y  perejil  menudamente  picado  y  se  arrima  á  up  fue- 
go muy  vivo  para  que  se  tueste.   Se 'sirve  con  salsa,  picante. 

032.  Asado  de  cabrito. — Se  pone,  á  dorar  la  carne  con 
unos  ajos;  ya  que  está  dorada  se  le  echa,  el  agua  suficiente 
y  un  poco  de  vinagre,  una  6  dos  cebollas  epteras,  un  jito- 
mate chico  ó  un  pedazo  .y  yerbas  de  olor.  Se  ,.¿apa  y  deja 
secar  en  su  misma  manteca.  ... 

633.  Cabrita  epigramático» — Se  esooje  un  buen  cuarto 
delantero  y,  se  separa  la  espaldilla,  que  se  atará  desde  luego 
en  una  cacerola;  se  cocerá  el  pecho  y.  cuando  lo -.está  se  pone 
entre  dos  cazuelas  pon  peso, por  encima  para  aplanarle;  se 
cortan  las  costillas,  se  preparan  y  colocan  en  una  .cacerola, 
polvoreándolas  con  un  poco  de  sal  y  rociándolas  con  mante- 
ca derretida.  Luego  que  la  cajne  dej  pecho  se  haya  enfria- 
do, se  hará  trozos  que  imiten  á  costillas;  se  empanan  y  ba- 
fian  con  huevos  batidos,  sazonándolos  con  pimienta,  sal  y 
manteca  derretida;  vuélvase  á  empanar,  otca.yez.  :Se.  cortan 
tiritas  delgadas  de  la  carne  de  la  espaldilla  á  las  cuales  se 
haoo  ló  mismo,  y  al  servirse  se  fríen  las  fingidas  costillas  en 
manteca  que  no  se  haya  empleado,  en  otros  fritos,  se  hacen 
'altar  én  la  cacerola  y  se  colocan  en  el  platón. 


106 

034.     Cabrito.— fie  fríe  en  erado  y  w  echan  en  la  carne* 

•  •    •  » 

la  al  miamo  tiempo  que  la  carne,  oebollaa  y  zanahorias  ente- 

rae,  tomillo,  mejorana,  agua  y  sal;  ouañao  eatá  a  medio  co- 
cerse  desata  harina' en  agua,  con  un  poco  dé  pimienta  y  ca- 
nela y  ae  echa  en  una'  cazuela,  agregándole  cuando  está  ya 
cocido  unas  yemas  de  huevo  crudas  que  deben  menearse  un 
rato. 

636.  Etpinaaód*  cAtvo.— Se  lava  él  espinazo  oon  agua  ti- 
bis  y  se  pone  á  hervir  con  agua  sal.  Se  remojan  y  desve- 
nad unos  chiles  mulatos  y  se  muelep  oon  cominos  y  media 
cabeza'  de  ajos  crudos  y  sal;  se  saca  el  espinazo  de  la  olla  y 
se  deja  escurrir;  se  embarra  bien  con  el  chile  y  se  fríe  en 
manteca.     Se  sirve  oon  ensalada  de  lechuga. 

636.  Lengua  de  cabrá  en  aceite  y  vinagre.  —Se  remojan  y 
lavan  en  agua  caliente,  se  echan  en  una  olla  oon  agua  y  sal 
y  se  ponen  á  cocer;  cuando  lo  están  se  sacan  de  la  olla  y  se 
les  quitan  los  pellejos,  se  cortan  en  pedazos  chicos  y  se  les 
echa  aceite,  vinagre,  una  euo&arada  del  caldo  en  que  se  co- 
cieron, unas 'rebanadas  de  cebolla,  aguacates^  chiles  ó  cnfl- 
potles  en  vinagre,  aceitunas  y  alcaparras. 

637.  Ubrte  dé  cabra  en  aceite  y  vinajfre.-— Se  ponen  á  co- 
cer y  cuando  están  se  rebanan;  se  muele  un  poco  de  pan 
abizcoohado,  seis  granos  de  pimienta  y  la  sal  necesaria;  se 
fríe  un  poco  de  perejil  y  toítí  estose  fríe  con  las  ubres; 
después  dé  enjuagadas  y  revolcadas  en  pan,  se  ponen  en 
un  platón  con  aceite,  vinagre;'  rebanadas  4e  cebolla,  chiles, 
aceitunas  y  alcaparras. 

63fc,!  Otra$.-Se'  cuecen  y  hacen  robanactás:  se  pica  un 
poco  de  jitomate  sin  pepitas,  cebolla,  ajó  f  $erejil  también 
pictóo;  sé  fríe  primeramente i 'él  jitomate  con  eí  perejil,  íjie- 


109 

go  la  oebolla  y  después  el  ajo;  se  muele  clavo,  canela,  pi- 
mienta y  sal  con  un  poco  de  vinagre,  y  en  este  caldo  se  echan, 
laa  ubres  A  que  hierran,  dejándolas  con  muy  poco  caldo;,  se 
les  echa  aceite  y  se  adornan  con  chiles  y  alcaparras. 

639.  (hitando  dt  ubres. — Se  cuecen  un  el. puchero,  se  ha- 
cen rebanadas,  se  frien  en  manteca  A  que  se  doren,  se  pi- 
can y  se  les  echa  un  poco  de  pan  rallado  para  freirías.  Se 
pone  en  una.  sartén  aceite  y  manteca,  y  para  cada  ubre  una 
tasa  de  cebolla  picada  menuda,  y  media  tasa  de  perejil  tam- 
bién modado.  Primeramente  se  fríe  la  oebolla  con  un  pol- 
vo de  pimienta,  se  junta  después  todo  el  recaudo,  .y  luego 
las  ubres  que  se  dejan  al  vaho  de  la  olla,  pues  si  se  calien- 
tan sa  echan,  á  perder.  .  , 

640.  Otra*. — Se  cuecen  las  ubres  enagua»  se  pica  jitoma- 
te, cebolla  y  ajo  y  se  echan  en  manteca;  se  doran,  aparte 
unos  dientes  de  ajo,  se  muelen  con  clavo,  canela  y  .pimienta 
y  se  echan  en  la  manteca  en  que  se  frió  .  lo  anterior;  •  se  le 
echa  lo  molido  y  un  poco  del  caldo  en  que  .se  cocieron  las 
ubres,  un  poco  de  perejil,  vinagre  y  aceite,  las.  ubres  reba- 
nadas y  se  dejan  cocer.  •    :.  .    .     4. 

ATES. 

64^.  Qui$gdo  4$  poUo$  con  Altiva. — Se  parten  crudos  y  se 
echan  .en  una  cazuela  con  unos  pedazos  de  jamón  y  chori- 
xos  partidos,  bastante  oebolla  picada,  dos  dientes  de  ajo  y 
una  cuharada  de  manteca  A  que  se  dqrpn  bien;  échesele 
luego  un  poco  de  harina  y  se  pone  A  freír  otro  poco; .  luego 
se  le  echa  un  poco  4e  agua  con  perejil  picado,  orégano  y 


200 

tomillo.  Frías*  unos  dientes  de  ajó  con' manteca,  muélate 
ettn  chm>;  canela*  y  ^ftntiétit»,  échese  'én  la  cazuela  en  que 
s*  coció  el  (tollo.'  "Cuándo  falte  ¿ocó  pata  stirrir  el  guiso, 
bátanse  enrfhsgre  seis*  ú  ocho  yemas  de  huero;  ya  batidos 
los* hueros1  %e* les1  agreda-zumo  de  limón  y  se  ra  echando  en 
la  cazuela  poco  &  poco  para  que  no  se  cuaje  el  huero,  me- 
neándolo  mucho.     El  caldo  ha  de  quedar  espeso. 

642.  Otro  dé  pollos  con  huevos.  —  Partido*  en  cuartos  se 
echan  en  Una  cazuela  cotí  jábtbn  f  chorizos  partidos,  cebo- 
lla y -ajo  picado  con  tina  cachañada  de  manteca. '  Frito  ya, 
échesele  agua  eir  poca  cantidad,  orégano  y  tomillo.  'Se  mue- 
len- cuatro  6  seis  yemas  de  huero  con'  Unas  almendras  con 
todo  y  cascara  y  fritas  en  manteca,  y  se  echánén  la  cazuela. 
Agregúese  claro*}  canela  y  pimienta;  todo  molido.  El  caldo 
debe  quedar  espeso.  Se  adorna  con  chiles,  aceitunas  y  al- 
caparras. 

&&.*' Otro  con  higaditós.— -Preparado  como  el  anterior, 
se  le  echa'  agua;  se  pica  cebolla  y  ajo  y  se  echa  en  otro  tras- 
te; muélanse  Hígados  dé-  pollo  y  jdñtense  con  la  cebolla; 
pónganse  i  freir;  ya  fritos  se  echa  en  la  carne;  añádase  pe- 
rejil picado,  claro,  canela  y  pimienta  molidos  y  una  reba- 
nada de  pan  frito  en  mapseyy  /Ü  servirlo  se  le  añade  un 
poco  de  aceite.     Se  adorna  como  el  anterior. 

(¡44.  Otro  con  papas. — Preparados  como  los  anteriores, 
«e  muelen  urna*  {fesas*  cor  huerca  y  unas  rebanadas  de  pan 
frito)  póngtfttse  á*  fréir  jútito  con  la  carne.  EfehéséTe'águá, 
orégano,  tomillo,  claro,  canela  y "prmten'ta  moKíios.  Al  ser- 
virse se  le  pone  r4fto  dé  Jerez;  el  caldo  debe  quedar  espeso. 
El  adorno  éomo  el  anterior. 

Otro  con  alcaparras. — Preparados  como  los  antera- 


res  y  ya  que  está  bieit  frita  ía  carné,  se  muelen  alcaparra* 
y  se  fríen  con  la  cebolla  y  se  vacia  en  la  cazuela,  á  la  que 
se  agrega  clavo,  canela  y  pimienta  molidos  con  rebabadas 
de  pan  frito  en  manteca;  el  caldo  debe  quedar  espeso.     E 
adorno  como  él  anterior;  ! 

646.  Otro  de  tornatt- — Preparados  como  los  anteriores  se 
muelen  unos  tomates  .oocidps  con,  un  poco  de  perejil,  oré- 
gano, tomillo,  yerbabuena  y  unos  dientes  de  ajo,  todo  bien 
molido.  Se  echa  en  la  cazuela,  donde  está  la  carne  y  des- 
pues  de  frito  se  le  echa  agua  y  se  muele  clavo,  canela  y  pi- 
mienta y  unas  rebanadas  de  pan  frito.  El  caldo  ba  de  que- 
dar espeso.     Se  adorna  como  el  anterior. 

647.  Otro* con  MtxaJwriaKn-Se  parten  los  pollos  en  cuar- 
tos y  se  echan  en  una  cazuela  junto  con  rebanada»  de  ja- 
món y  ohoriHos,  una*  rebanadas  de  zanahoria,  una  cucha- 
rada de  manteca  y  un  poco  de  tomillo,  todo  se  echa  á  freir 
muy, bien  y  ya. que  está  fritóse  le  echa  un  poco  de  agua, 
después  se  le  echa  aceite  y  se  le  muele  clavo,  canela  y  pi- 
mienta, y  para  llevarlo  á  la  mesa  se  le  echa  un  poco  de  vino 

1  Jerez  y  se  adorna  el  platón  con  •  chiles,  aceitunas  y  alca- 
parras. ••>  .  • 

648.  *  -  Otro  con  tomate*.  ¿-Se,  parten1  les  pollos  en  cuartos 
y  se  echan  en  una  cazftela  jtmto  con  unas  rebanadas  de  ja- 
món y  chorizos,  unos  tomates  picados  y  un  poco  de  ajo  y 
cebolla  picada  con  una  cucharada  de  manteca;  se  deja  á  que 
se  fría  bien;  después  se  le  echa  una  poca;  de  harina  y -sé  de- 
"ja  freír  otro  poco;  después  se  le  echa  una  poca  de  agua, 
un  -poco  de  tomillo,  orégano,  unas  hojas  de  laurel  y  sé  mue- 
te«la*0 «y  canela,  y  ya  «para  llevarlo  á  la  mesa  se  le  echa  acei. 


302 

te  y  ha  de  quedar  espato  y  se  adorna  el  platón  oon  chiles, 
aceitunas  y  alcaparras. 

649.  Otro  con  almendra, — 8e  parten  los  pollos  en  cuar- 
tos, se  echan  en  una  cazuela  con  rebanadas  de  jamón,  cho- 
rizos y  una  cucharada  de  manteca,  y  ya  que-  está  bien  frito 
se  le  echa  agua  y  se  pican  dos  6  tres  jitomates,  cebolla  y 
ajo,  todo  se  fríe  en  otro  traste,  se  tuestan  unas  almendras 
con  cascara  y  se  muelen  bien  y  se  echan  á  que  se  frían  muy 
bien  oon  el  jitomate  y  ya  que  está  bien  frito  se  echa  en 
la  cazuela  de  los  pollos,  sé '  muele  clavo,  canela,  pimienta 
y  se  le  echa  orégano  y  tomillo,  se  fríen  unas  rebanadas' de 
pan  en  manteca  y  se  muelen,'  y  se  echan  en  la  cazuela  para 
llevarlo  á  la  mesa,  se  le  echa  un1  poco  de  vino  Jerez  y  na  dé 
quedar  espeso  el  caldillo  y  se  adorna  el  platón  "oon  chiles, 
aceitunas  y  alcaparras. 

660.  Otro  conateUanaM.^-8%  parten  loe  pollos  en  cmus 
tos  y  se  echan  rebanadas  de  jamón,  uno*  chorizos  y  una 
cucharada  de  manteca,  ya  que  ee  frió  se' le  echa  agua,*  se 
pica  cebolla  y  ajo  y  esto  se  fríe  en  otro  traste,  se  fríen 
unas  avellanas  en  manteca ¿  después  se  muelen  muy  bien 
y  se  echan  á  freír  con  manteca  f  fuego  se  vacian  en  la  ce-* 
zuela  de  la  carne,  se  muele  clavo,  canela,  pimienta  y  unas 
rebanadas  de  pan  frito,  se  le  echa  un  poco  de  orégano,  to- 
millo, pasas  y  almendras,  y  para  llevólo  a  le  mesa  sale  echa 
un  poco  de  vino  Jerez  y  se  adorna  el  platón  con  chiles, 
aceitunas  y  alcaparras. 

66L  Otro  con  martasa.  — Se  parten  ios  -  pollos  en  «mar. 
tos  y  se  les  echa  unas. rebanadas , . de  jamón,  unos  chorizos 
con  una  cucharada  de  manteca  y  ya, que  está  bien  frjAo,  .se 
le  echa  una  poca  de  agua  y  en  .otro  traste  se  fria  una.  poca 


203 

de  cebolla,  ajo  picado  y  se  muele  una  poca  de  mostaza,  ya 
que  se  le  quitó  lo  picante  lo  mismo  que  para  salsa,  se  mué- 
le  bien  y  se  echa  donde  está  la  cebolla  frita,  después  se  po- 
ne en  donde  está  la  cazuela  de  la  carne  y  se  muele  clavo, 
canela,  pimienta  y  unas  rebanadas  de  pan  fritas,  se  le  echa 
orégano  y  tomillo,  para  llevarlo  á  la  mesa,  se  le  echa  un  po- 
co de  vino  Jerez  y  se  adorna  el  platón  con  chiles,  aceitunas 
y  alcaparras. 

652.  Otro  con  aceitunas. — Se  parten  los  pollos  en  cuar- 
tos y  se  echan  unas  rebanadas  de  jamón,  unos  chorizos  junto 
con  una  cucharada  de  manteca,  ya  que  está  bien  frito,  se  le 
echa  una  poca  de  agua,  en  otro  traste  se  fríe  una  poca  de 
cebolla,  ajo  picado  y  se  muelen  unas  pocas  de  aceitunas  sin 
hueso  con  un  poco  de  perejil  fresco,  ya  que  está  bien  remo- 
lido, se  echa  en  la  cazuela  donde  está  la  carne  á  que  se  fria 
muy  bien,  después  se  le  echa  agua  y  se  le  muele  clavo,  ca- 
nela, pimienta  y  unas  rebanadas  de  pan  fritas  en  manteca, 
se  le  echa  un  poco  de  orégano,  tomillo  y  ha  de  quedar  el 
caldillo  espeso  y  se  adorna  el  platón  con  chiles,  aceitunas  y 
alcaparras. 

663.  Otro  con  harina. — Se  echan  los  pollos  en  cuartos 
en  una  cazuela  con  una  cucharada  de  manteca,  junto  con  la 
carne  y  unas  rebanadas  de  jamón,  unos  chorizos,  bastante 
cebolla  picada,  unos  dientes  de  ajo,  un  poco  de  tomillo,  se 
deja  freir  todo  muy  bien,  luego  se  le  echa  una  poca  de  ha- 
rina, se  deja  freir  otro  poco  y  se  le  echa  una  poca  de  agua, 
se  le  muele  clavo,  canela  y  pimienta,  se  le  echan  unoa  pocos 
de  chorizos  crudos  en  el  caldillo  á  que  quede  espeso,  se  .le 
echa  un  poco  de  vino  Jerez  y  se  adorna  el  platón  con  chi- 
les, aceitunas  y  alcaparras. 


204 

654.  Otro  con  nueces. — Se  parten  loe  pollos  en  cuartos 
y  se  lee  echa  unas  rebanada»  de  jamón  y  unos  chorizos  jun- 
to con  una  cucharada  de  manteca,  se  pica  cebolla,  ajo  y  se 
pone  á  que  se  fría  todo  junto,  después  se  le  echa  agua,  se 
limpian  unas  nueces,  se  remuelen  bien,' se  echa  manteca  en 
una  cazuela  y  allí  se  fríe  bien,  ya  que  está  bien  frito,  se 
echa  en  la  cazuela  de  la  carne  y  se  muele  clavo,  canela,  pi- 
mienta y  unas  rebanadas  de  pan  frito,  se  adorna  el  platón 
con  chiles,  aceitunas,  alcaparras  y  ha  de  quedar  espeso  el 
caldillo. 

665.  Qilisado  depoüoeh  óUá.' — Se  limpian  bien  los  animales 
en  agua  caliente;  después  se  lavan  en  agua  fría.  Se  pone 
una  olla  en  la  lumbre  con  manteca,  se  echan  en  la  olla  los 
pollos  y  menudencias,  se  pican  uno  ó  dos  jitomates  sin  pe- 
pitas, dos  6  tres  manojos  de  cebolla  en  gajos,  unos  ajos  ma- 
chacados, jamón  rebanado  y  hojas  de  laurel,  un  poco  de. to- 
millo y  otro  de  orégano.  Ya  frito  todo  junto  se  le  agrega 
vino  carlbn,  agua  suficiente  para  que  cueza,  sal,  clavo,  ca- 
nela y  pimienta.  Se  tapa  la  olla,  se  pone  á  hervir  hasta 
que  consuma  el  caldo.  Se  adorna  con  chiles,  alcaparras  y 
aceitunas.' 

656.  Quitado  de  pollo. — Se  cuecen  los  pollos  en  sal  parti- 
dos en  cuartos,  y  ya  medios  cocidos  se  fríen  en  bastante 
manteca  y  se  les  echa  el  caldo  donde  se  cocieron.  Se  fríe 
üh  poco  de  harina,' se  )é  echa  unas  yemas  de  huevo  batidas 
con  vinagre  y  en  tocias  especias.  '"' 

657.  Otro  de  peño. — Se  pica  cebolla  y  se  fríe  en  manteca; 
se  saca  é*sta  y  se  fríe  perejil;  ya  fritó  se  muele  con  clavo, 
canela,  pimienta  y  un  pedazo  de  pan  frito,  luego  se  agrega 
el  caldo  en  que  se  coció  el  pollo  y  pedacitos  cíe  jamón. 


205 

658.  Oteado  de  pollo  con  chícharo*. — Se  echan  lo»  pollos 
en  una  cazuela  con  un  poco  de  manteca,  .  bastante  cebolla 
picada  muy  menuda,  y  un  poco  de  tomillo.  Se  pone  la  ca- 
zuela al  fuego,  y  ya  que  está  frito  se  le  echa  un  polvo  de 
harina  y  se  deja  freir  otro  poco  y  después  se  le  echa  agua.  Se 
mondan  unos  chícharos  y  crudos  se  le  agregan  con  clavo, 
canela  y  pimienta  y  un  poco  de  vino  de  Jerez.  Se  adorna 
con  chiles,  aceitunas,. alcaparras  y  alcaparrones. 

669.  Otro  de  pollo. — Se  pican  cebollas,  ajo,  perejil  y  .oré- 
gano y  se  pone  á  freir.     Se  muelen  jitomates  sin  pepitas 
almendras  tostadas  en  manteca,  clavo,  canela  y  pimienta  y 
ae  echa  en  el  recaudo  i  .que  se  frie,  y  luego  el  caldo  en  que 
se  cocieron  los  pollos.     Se  ponen  luego  chorizones,  jamón, 

"i 

lomo  de  puerco  rebanado  y  los  pollos,,  acitrón,  pasas,  al- 
mendras, aceitunas,  alcaparras  y  chiles  en  vinagre:  al  ser- 
virlo se  les  agrega  vino  de  Jerez. 

'  660.  Poüo  brii*cadof-¡-r&e  parten  los  pollos  en,  cuartos  y 
se  ponen  á  freir  en  abundante .manteca,  con  bastante  cebolla 
picada  muy  menuda  y  unas  papas  partidas  en  cuarterones. 
Déjese  freir  hasta  que  el  pollo  esté  bien  blanco,  y  échesele 
un  puflo  grande  de.  perejil  á  que  se  sancoche  allí,  después 
poca  agua  para  que  se  forme  salsa  y  se  acabe  de  cocer  el 
pollo. 

661.  Quitado  de  pollos  relleno*.  — Ya  pelados  los  pollos  se 
íes  hace,  una  abertura, chica, á  lo -largo  que. pueda,  coserse 
después  de  rellenar:  el  relleno  se  hace  lo  mismo  que  el  pi- 
cadillo para  rellenar  chiles.  Se  desfleman  unos  jitomates 
grandes.  Ta  rellenos  los  pollos,  se.  cose  la  abertura  para 
qué  no  se  salga  el  relíenoste .- envuelven. en  el  jitomate  he- 
cho rebanadas  y  se  acomodan  en  la  sartén  á  la  cual  se  echa 


206 


un  cuartillo  de  ?ino  de  Jerez,  otro  de  vinagre  de  -Castilla  y 
ano  de  vinagre  criollo,  ajos,  yerbee  aromáticas  y1  se  deja  que 
dá  algunos  hervores  en  el  caldillo;  se  voltea  procurando  que 
no  se  caiga  el  picadillo  ni  él  jitomate. ' '  Cuando  se  colocan 
en  la  sartén  sé  pené  sobre  ellos  un  comal  y  encima  uno  6 
dos  ladrillos  pkn¿  que  q  uéden  aprensados: 

662.  Quitado  dé  poÜo$  can  las  menudencias,— Be  pican  las 
menudencias* menos  las1  tripas  en  trocitos  con  un  pedazo  de 
jamón,  perejil,  cebolla,  ajo  bastante  y  se  fríe  con  aceite  y 
manteca.  Se  sancochan  los  pollos  y  después  se  echan  en  el 
recaudo  con  caldo  ó*  agua,  clavo,  canela  y  pimienta.  Si  le 
falta  aceité  se  le  agrega  un  poco.  SÍ  se  quiere  con  salsa  se 
deja  suelto  y  si  no  casi;  secó.  Se  hace  á  fuego  lento  y  se 
adorna  con  chiles  y  aoeltünaá. 

663.  Polbécon  arrota  Wattalana,  llamado  del  eazaclor. 
— Partidos  los  pollos  se  medió  fríen '  en  crudo  en  manteca 
abundante  y  se  apartan  de  la  lumbre.  En  otra  camela  se 
fríen  en  aceite  dos  6  tres  jitomates  grandes,  partidos  en  pe- 
dazos, dos  cebollas  picadas,  unos  dientes  de  ajo  picados  tam- 
bién y  perejil  -  Ta  que  está  casi  hito  el  recaudo  se  le  echa 
el  arroz  en  seco,  es  decir1,  sin  lavar  y  limpio  solamente  de 
toda  basura,  y  se  le  deja  tostar  á  que  no  se  queme  y  en- 
tonces se  echan  los  cuartos  del  pollos  con  su  manteca  á  que 
acaben  dé  f reine  con  el  arroz  y*  él  recaudo,  que  se  frío'  en 
aceite.  Téngase  á  prevención  una  otfitk  con  agua  hirviendo 
proporcionada,  qué  se  echará  en  la  cazuela  con  la  carne  y  el 
recaudo,  y  tápese  con  un*  comal  después'  de  echarle  la  sal 
correspondiente^1  Debe  cocer  i  fuego  vivó  y  bastan  veinte 
minutos  6  Cuando  mas  media 'hbra'  para  que  el  arroz  quede 
cocido  y  entero.    Se  retira  dé  la  lumbre  y  se  deja  reposar 


907 

un  rato  á  que  «arito  de  cocerse  con  su  propio  vaho,  sin  des- 
tapar la  camela. 

Téngase  presente,  pues  etfmuy  indispensable,  que  el  arroz 
no  puede  mojarse  antes  de  echarlo  en  la  cazuela,  pues  su  pro* 
pia  harínilla  le  favorece  para  cocer  bien  sindeshaoersé  y  con- 
vertirse en  una  especie  de  atole  que  le  hace  perder'  su  for- 
ma y  sabor.  '  Como  regla  general,  debe  tenerse  presente  que 
el  arroz  no  puede  mojarse  antes  de  cocerse  y  mucho  menos 
en  agua  fría,  porque  se  pasma  7  ya  no  es  posible  cocerle  sin 
que  el  grano  se  convierta  en  polvo  7  pierda  su  forma. 

664.  Qnúado  de  polU*..— Después  dé  bien  limpios  se  po- 
ne manteca  en 'la  sartén  f  se  réhogaüy  Itoégó  se  colocan  en 
la  olla  donde  han  de  oocer  7  en  la  grasa  que'  queda  se  fríe 
alguna  <eobólla,  7  se  echa  sobre  los  pollos  con  todas  especias.' 
En  seguida  se  añade  un  poco  de  sal  7  un'  vaso  de  vino  blan- 
co, 7  se  ponen  á  fuego  lento  con  un  pucherito  dé  agua  en- 
cima, 7  un  lienzo  ó  papel  para  evitar  la  evaporación  do  las 
sustancias,  debiendo  estar  así  cerca  de  una  hora.  Sé  so- 
breasan los  higadillos  de  los  pollos,  se  machacan  con  un  dien- 
te de  ajo,  se  mezclan  con  el  caldo  7  bien  sazonado,  *e  tapa 
de  nuevo  7  se  le  deja  dar  un  par  de  hervores,  con  lo  <Jüe  sa- 
le una  excelente  salsa. 

666w  Pollo*  frito*. — Se  ponen  á  cocer  los  pollos  con  acei- 
te, sal,  zumo  de  limón  6  vinagre,  chile  verde,  cebollasyy  pe- 
rejil picado.  Luego  que  hayan  tomado  la  sustancia  de  es- 
tos ingredientes,  ae  escurren  bien  7  se  fríen  con  aceite,  sir- 
> viéndolos  con  una  salsa  deJaviemo  líquido ¿  con  sal,  pimien- 
ta, ruedas  de  limón  7  perejil  muy  picado. 

-666*  Polli»  <uadoé.— Sé  les  quitan  los  alones  y  cuello  y  se 
ponen  dentro  unos  pedantee  de  tocino  gordo  con  pimienta. 


•al>  perejU.'mchacftdo,  añadiendo  jitomates;  se  envuelven 
en  un  pliego  de  papel  de  estraza  untado  con  manteca,  y  te 
asan,  atándolos  con  un  hilo  pan  que  no  se  caiga  el  papel. 

.667.  .  Puüo*  con  jitomate*  r-»Se  parten  en  cuatro  trozos, -.y 
se  rehogan,  en  manteca  con  sal,  y  en  otra  cacerola  se  frie  un 
ajo,  cebolla- picada  y  jitomate,  y  cuando  esté  bien  frito  se 
vuelven  á  echar  en.  ella  ios  .trozos  de  pollo  dejándolos  un 
cuarto  de  horaá  fuego. lento,  para  que  tomen  eL  gusto  del 
jitomate.       ■'<'■■''■■ 

668.  PoUfide  (H*rt*fcm— Se  hacen  cuartos  y  se.  fríen  en 
sartén  con  aceite; se  prepara. un  puchero  con  agua  sazona- 
da con  sal,  y  «se.  machacan  unos,  ajos  con  azafrán*  agraz  6  un 
poco  de .  vinagse,  jdesliándcdo  bien  con  agua  .del .«puchero,  y 
se  echa  todo  en  éste  con  un.  puñado  de  pan  rallad*  'deján- 
dolo queda  un  par  de 'hervores;,  se  tienen  los  pottesjejí  uña 
cazuela  6"  tortera  y  se  leseqha  por.  encima  la  salsa  y  que  cue- 
zan un  poco  cuidando  de /Henearlos  á  menudo;  es  un.  guiso 
pronto  y  gustoso..  »  •-. 

.669.  Pollo*  en  Ml$a  de  jitomate.  <— Pespues  .de  chamusca- 
dos y.,  ^quitadas  las.. gatas,  quello  y  huesos,  del  esternón,  se 
ponen  en  la  cavidad  que  dejan  en;  el  ave,  algunas  -  lonjitas 
de  limón.  En  este  estado  se  ponen  en  la  cacerola,  se  cubren 
con  pedazos  de  jamoib,^  baos-  cocer  á  dos  fuegos  duran- 
te una.  hora.  Quanda  están  ooeidos  se  sirven  con  salsa  de 

jitomate.  ..;/•»    '      "  v  -'•:-ii-- 

670.  Pollos  con  anchoa*.  -H-Se  machacan  y  mezclan  loa  hí- 
gados con  tocino,  perejil,  cebrilM.yancboas;  se  mezcla  Un 
poco  de  pimienta,  se.  les  introduce  esta  mezcla  entre,  el  pe- 
llejo y  .la  carnease  cabreo  fíen  lonjas  dejanaan',  yuaa.tooja 
de. papel  dada  4*  manteca,  y  así  se>$oneit  .en  el  iasadon;>se 


208 

servirán  con  ana  salsa  de  jamón  6  ternera,  y  se  ponen  laa 
anchoas  cortadas  en  pequeños  pedazos. 

671.  Pollos  envino. — Con  un  pollo  bien  cebado,  se  hace 
la  operación  siguiente,'  después  de  limpio  se  rehogan  á fuego 
activo  en  una  cacerola  con  aceite,  en  lo  general  con  un  poco 
de  ternera  partida  en  lonjas  delgadas;  échesele  después  vino 
y  cuando  el  ave  esto  en  sazón  se.  aparta,  pasa  por  tamiz  la 
salsa,  echándola  un  poco  de  harina  disuelta  en  mantequilla. 

672.  Pollo  con  coliflor. — Con  un  poco  de  jamón  \  se  pica 
el  hígado  de  un  pollo,  añadiéndole  perejil,  cebollas  y  chile 
verde,  y  de  esto  se  hace  una  masa,  se  rellena  el  pollo  y  se 
le  asa  en  cazuela.  Cuezase  aparte;  se  añade  con  caldo  y  vino 
habiendo  echado  antes  la  coliflor,  y  se  sirve  colocando  la 
masa  al  rededor  del  ave. 

673.  PoUo»  guisados  á  la  habanera. — Desplúmense  bien , 
y  pásese  un  papel  hecho  llama  para  que  la  pelusita  que  siem- 
pre les  queda,  se  queme;  ábranse  y  saqúense  el  vientre  y 
demás  menudencias,  limpíense  bien  y  pártanse  en  cuartos 
poniéndolos  á  freir  en  manteca  con  unas  tajadas  de  jamón; 
estando  medio  dorados  se  les  echa  chiles  verdes  en  pedazos, 
perejil,  jitomates,  ajos  y  cebollas,  todo  picado;  se  sofríe 
todo  esto  oon  los  pollos,  anadiándole  un  poco  de  canela,  pi- 
mienta, clavo  molido  y  un  poco  de  vinagre.  Cuando  se  co- 
nozca que  están  los  pollos  medio  cocidos  se  les  agrega  unas 
pasas,  almendras  tostadas  machacadas,  alcaparras  enteras, 
rebanadas  de  plátanos  fritos  y  dos  tazas  de  caldo  del  puche- 
ro; se  deja  hervir,  proourando  que  la  salsa  quede  espesa. 

674  Pollos  guisados  á  la  cubana. — Practicadas  las  opera- 
ciones de  limpieza  que  se  han  dicho  para  los  anteriores,  se 
parten  en  cuartos;  éohanse  en  una  cazuela  con  bastante  man- 

•  LA  COCINERA  POBLANA. — TOM.  I. — 14. 


33p 

teca,  y  en  ella  tres  oebollaa  partidas  en  cuatro  pedazos,  seis 
dientes  de  ajo  enteros,  un  poco  de  orégano,  especias  finas, 
vinagre  un  poco,  medio  Taso  de  vino  seco,  sazónese  de  sal ; 
pónganse  al  fuego  y  cuando  se  crea  están  medio  cocidas,  añá- 
danse tres  chiles  en  rinagre,  dejándolo  cocer  todo  á  fuego 
lento  hasta  que  se  considere  pueden  servirse. 

675.  Chitado  de  pollo  francés,  llamado  tauti. — Se  parte 
el  pollo  en  pedazos,  se  refríe  con  una  buena  cantidad  de  man- 
tequilla, se  le  echa  sal,  pimienta,  nuez  moscada  y  una  cu- 
charada de  harina;  ya  que  todo  está  medio  frito  se  le  echa 
un  poco  de  caldo,  vino  blanco,  perejil  picado,  hongos  secos 
llamados  ckampignon*,  se  dejan  hervir  á  que  se  reduzca  la 
salsa.  • 

676.  Pollo  ton  aceituna*. — Partido  el  pollo  en  pedazos  se 
fríe  en  mantequilla  con  unos  pedazos  de  jamón ;  luego  se 
saca  el  pollo  y  el  jamón,  se  dora  un  poco  de  harina,  se  le 
echa  una  taza  de  caldo,  sal,  pimienta  y  perejil,  se  quitan  los 
huesos  á  las  aceitunas,  se  lavan  con  agua  caliente,  se  echan 
los  pollos  y  jamón  en  el  recaudo  y  las  aceitunas  cinco  mi- 
nutos antes  de  servirse. 

677.  Pollot  borracho*. — Embarrada  la  cazuela  de  manteca 
se  ponen  capas  de  pollos  en  cuartos  y  otra  de  jamón,  pasas 
y  almendras  y  por  encima  ajonjolí,  hasta  que  se  llena  la 
cazuela  que  ha  de  tener  encima  de  todo  las  especias  siguien- 
tes en  polvo:  olavo,  canela,  pimienta,  cominos,  oulan tro  tos- 
tado, dientes  de  ajo,  vino  y  vinagre.  Se  le  echa  poca  agua, 
se  pone  á  cocer,  y  se  adornan  con  aceitunas  y  tornachiles. 

678.  PoUo$  morisco*. — Se  pican  ajos  y  bastantes  cebollas, 
orégano,  perejil,  yerbabuena  y  un  poco  de  culantro  verde; 
se  muele  ajonjolí  y  cominos.    Se  fríen  aparte  unoe  dientes 


911 

de  ajo  oon  bastante  mantea»,  y|  á  medio  freír  te  agrega  pe- 
rejil, orégano  y  canela,  que  se  muele  aparte.  Se  deshace  con 
unas  yemas  de  huevo,  claro,  canela,  azafrán,  vino  y  vina- 
gre, y  se  echan  los  pollos  en  este  recaudo;  que  después  se 
sancocha.  Se  agregan  chorizos,  criadillas  rebanadas,  alca- 
parras, alcaparrones,  orégano  en  polvo,  acitrón  y  aceite. 

679.  Capón  atado. — Los  mejores  son  los  que  no  'pasan  de 
oeho  meses.  Se  preparan  para  ponerlos  en  asador  y  se  sir- 
ven como  las  pollas.  Guando  son  viejos  se  cuecen  como  el 
guajolote  en  adobo. 

680.  Capan  en  arras. — Después  de  limpio,  vaciado  y  des- 
cañonado, sujétensele  los  muslos,  volviendo  las  patas  hacia 
dentro,  póngase  con  el  pecho  hacia  abajo  en  una  cacerola 
llena  de  caldo  del  puchero  ó  de  sustancias.  Luego  de  bien 
espumado  se  añade  libra  y  media  de  arroz  bien  limpio  y  sin 
lavar,  se  tapa  la  cacerola  y  se  deja  hervir  á  fuego  lento  unas 
dos  horas.  Se  pone  el  capón  en  un  platón,  se  quita  el  caldo 
al  arroz,  se  acaba  de  componer  con  manteca  bien  en  sazón, 
y  se  vierte  sobre  el  ave;  si  estuviese  demasiado  espeso,  se 
le  añade  un  poco  de  caldo. 

681.  Capón  en  sal  gorda. — Preparado  como  el  precedente 
désele  unas  vueltas  en  la  sartén  con  manteca  y  póngase  á 
cocer  en  caldo  de  puchero  ó  de  sustancias.  Después  de  bien 
cocido  se  pone  en  el  platón,  regándole  con  el  jugo  de  vaca 
y  expolvoreándole  el  pecho  con  sal  en  granos  gordos. 

682.  Capón  cocido. — Después  de  preparado  se  rocía  con 
sumo  de  limón,  se  le  cubre  con  lonjas  de  tocino,  y  se  pone 
á  cocer  á  fuego  lento  con  cebollas,  ajos,  tocino  picado  y  su 
mismo  pescuezo,  se  humedece  con  caldo  y  se  sirve. 

683.  Capón  mediado — Póngase  en  uua  cazuela  un  capón 


212 

mochado  con  pedacitos  de  tocino  y  algo  de  ajo;  y  después 
de  rehogado  échesele  caldo,  y  cuando  este*  en  punto  se  saca  el 
capón,  se  cuela  la  salsa  y  se  vuelve  á  poner  el  capón  en  me- 
nos cantidad  de  aquella.  Póngase  á  enfriar  en  un  platón;  y 
bañada  con  una  salsa  que  tenga  manteca  y  harina,  se  le  cu- 
bre con  miga  de  pan,  se  pone  en  el  horno  ó  sobre  la  parri- 
lla para  que  forme  costra  y  se  sirve  con  una  salsa  picante. 

684.  Capón  relleno.  —Destrípese  el  capón,  y  después  de 
cocido  se  pican  todos  los  menudos  con  un  caldo  que  tenga 
miga  de  pan  cocido  con  nata,  un  cuarterón  de  manteca,  pe- 
rejil, cebollitas  verdes  picadas  muy  menudas  y  pasadas  por 
manteca,  sal,  pimienta  v  tres  yemas  de  huevo;  se  llena  el 
interior  con  el  relleno,  cubriéndolo  ligeramente  con  miga 
de  pan;  se  dora  el  capón  en  manteca,  se  vuelve  á  empanar 
otra  ves,  y  se  le  da  color  en  el  hornillo.  Sírvase  con  salsa 
picante. 

685.  Gallina  atada, — Móchese  con  lonjas  de  tocino,  en- 
vuélvase en  un  papel  engrasado  y  póngase  en  el  asador; 
cuando  esto  casi  asada  se  le  quita  el  papel  para  que  tome 
color,  se  bañan  las  lonjas  de  tocino,  si  se  puede  se  ooloca 
sobre  berros  de  fuente,  expolvoreada  de  sal,  con  un  poco  de 
vinagre  y  se  sirve  regada  con  jugo. 

686.  Pepitoria  de  gallina. — Se  corta  en  trozos,  escáldense 
tres  minutos  en  agua  hirviendo,  escúrranse  y  pónganse  en 
una  cacerola  con  manteca,  perejil  en  rama  y  cebollas  peque- 
ñas: rehogúese  el  todo,  añádase  una  cucharada  de' harina  y 
mójese  con  caldo,  se  sazona  con  sal  y  pimienta,  hágase  co- 
cer, y  después  retírense  los  cuartos  de  gallina;  redúzcase  la 
salsa,  que  se  ouela,  ligúese  con  yemas  de  huevo  sin  que  hier" 
va,  y  échese  sobre  los  pedazos  de  gallina  con  zumo  de  limón. 


218 

687.  Pepitoria  de  menudiüo*  de  gallina,  etc. — Con  los 
alones»  mollejas,  crestas,  pescuezos  6  higadillos  se  hace 
ana  pepitoria,  friéndolas  después  en  manteca  con  cebolla  y 
jitomate;  luego  se  machacan  ajos,  pimienta,  sal,  clavillo, 
canela  y  perejil;  cnando  están  cocidos  y  menguada  la  salsa, 
se  echa  salsa  de  avellanas,  con  la  cual  dará  un  hervor,  y 
después  se  pone  un  poco  de  ácido  de  limón. 

688.  Albondiguillas  de  gallina,  etc. — Se  tomarán  las  pe- 
chugas y  se  picarán  menudo  con  alguna  gordura  de  gallina; 
se  mezclará  con  el  picado  pan  en  remojo  y  yemas  de  huevo 
cocido,  sal,  pimienta  y  canela  molidas;  se  bate  todo  en  hue- 
vo crudo  dándole  la  suficiente  consistencia;  se  hacen  las  al- 
bondiguillas redondas,  empanándolas  al  rededor,  y  después 
de  fritas  se  cuecen  en  sustancia  de  aves  y  se  echa  salsa 
blanca. 

689.  Gallina  en  pebre. —Estando  limpia  y  sin  vientre,  se 
pone  á  asar  en  unas  parrillas,  untando  muy  á  menudo  con 
manteca  derretida,  sumo  de  limón,  sal  y  ajos  machacados; 
estando  medio  asada,  se  pone  en  una  cazuela,  echando  man. 
teca,  perejil  picado,  pimienta,  sal,  dos  6  tres  hojas  de  lau- 
rel, el  unto  6  manteca  que  sobró  del  asado,  media  taza  de 
aceite  crudo  y  la  agua  suficiente  hasta  cubrirla;  se  deja  que 
hierva  hasta  que  está  blanda,  se  saca  la  gallina,  deslíense 
en  él  caldo  ocho  yemas  de  huevos,  batiéndolas  bien  para 
que  espese  el  caldo;  se  \e  deja  hervir  un  poco,  y  se  echa  por 
encima  de  la  gallina,  que  estará  en  un  platón,  y  se  sirve. 

690.  Gallina  con  arroz. — Se  cuece  en  una  cacerola  con 
agua  que  le  cubra,  sal,  un  poco  de  tomillo,  laurel,  clavos, 
tres  cebollas,  dos  betabeles  y  jamón  partido  en  pedazos. 
Cuando  esté  poco  menos  que  cocida,  se  quitan  las  cebollas 


m 

y  lo*  betabeles  y  se  proporciona  el  caldo  al  arroz,  que  te 
echará  en  seguida,  y  podrá  ser  como  media  libra.  Cuando 
esté  cocido  te  apartará,  y  ae  pondrá  la  gallina  encima. 

También  puede  hacerse  rehogando  la  gallina  antes  de  co- 
cerla; puede  también  dejarse  cocer  hasta  que  la  gallina  este* 
en  punto,  y  sacarla  entonces  para  echar  el  arroz.  De  todos 
modos  se  sirve  encima  de  éste. 

691.  Gallina  con  cebolla*. — Rehogada  la  gallina  en  man- 
teca con  sal,  pimienta,  tomillo,  clavo  y  laurel  se  ponen  en 
la  cazuela  quince  6  diez  y  seis  cebollas  pequeñas,  se  dejan 
rehogar,  se  añade  un  poco  de  caldo,  y  se  cuece  á  fuego  len- 
to cinco  ó  seis  horas,  hasta  que  la  gallina  está  bien  pasada; 
entonces  se  espesa  la  salsa  con  harina  y  se  sirve  la  gallina 
rodeada  de  las  cebollas. 

Algunos  cuecen  la  gallina  sin  las  cebollas,  rehogan  éstas 
aparte,  y.  no  las  reúnen  hasta  una  hora  antes  de  que  aque- 
lla está  en  punto. 

092.  Gallina*  frita*  con  adobo. — Prepárese  un  adobo  com- 
puesto de  vinagre,  caldo,  sal,  perejil,  cebollas,  ajos  macha- 
cados y  laurel;  pdnense  en  él  los  trozos  de  la  gallina  des- 
huesada y  cocida  del  día  antes,  y  se  tienen  en  adobo  dos  6 
mas  horas  sobre  ceniza  caliente;  se  sacan,  se  escurren;  se 
envuelven  en  harina,  se  fríen  y  se  sirven  con  perejil  frito. 

693.  Croqueta*  de  gallina,  etc. — Limpias  de  tendones  su» 
carnes,  se  pican  muy.  menudo  con  miga  de  pan  empapada 
en  leche  y  yema  de  huevo;  cuando* está  bien  batido  y  sazo- 
nado, se  hacen  unas  bolitas,  que  se  envuelven  en  miga  de 
pan;  en  seguida  se  humedecen  en  huevo  batido  y  se  vuel- 
ven á  empanar;  se  fríen  y  se  sirven  en  pirámides  con  pere- 
jil frito  por 


tl5 

69Í.  Gallina  d  la  Marengo. — Cortea*  ana  oomo  para  la 
pepitoria,  póngase  en  una  cacerola  con  casi  una  media  libra 
de  buen  aceite  y  sal,  hágasela  tomar  buen  color;  un  momen- 
to antes  que  esté  enteramente  se  añade  un  ramo  de  perejil 
y  yerbas  finas,  cuando  todo  está  pronto  coloqúense  en  el 
platón  los  cuartos  de  la  gallina.  Hágase  en  otra  cacerola 
una  salsa  italiana,  échese  en  ella  poco  á  poco,  y  meneando 
sin  cesar  el  aceite  en  que  se  ha  frito  la  gallina,  y  cuando  es- 
ta salsa  este*  hecha  y  de  buen  gusto,  se  echa  sobre  ella,  que 
se  habrá  cuidado  de  tenerla  caliente,  y  que  se  acaba  de  ador- 
nar con  cortezas  de  pan  frito. 

696.  Pepitoria  de  guajolote  ó  gallina. — Limpióse  la  ave 
con  una  servilleta  seca,  y  se  pone  en  pedazos  á  rehogar  con 
jamón  picado  ó  manteca,  ajo,  perejil,  sal  y  un  poco  de  pi- 
mienta; se  echan  después  un  par  de  pocilios  de  caldo  del  pu- 
chero, y  se  hace  una  salsa  con  clavillo  de  especia,  ajo  tos- 
tado, perejil,  unas  avellanas  y  una  yema  de  huevo;  se  des- 
líe con  el  mismo  caldo  y  se  echa  en  el  puchero  á  que  oueza 
un  rato;  si  no  está  muy  espesa  la  salsa,  se  echan  un  par  de 
yemas  de  huevo  y  se  extienden  por  encima. 

696.  Chitado  de  gallina. — Después  de  asadas  se  hacen 
cuartos  y  se  rehogan  con  manteca,  cebolla  picada  y  perejil; 
cuando  esté  en  punto  se- echa  el  caldo  mas  preciso  para  que 
se  cubran  y  un  poco  de  vino  6  vinagre  y  manteca  fresca;  se 
sazona  con  especias,  y  si  se  quiere,  .puede  ponerse  un  poco 
de  verdura  picada,  y  en  particular  de  acederas,  que  hacen 
un  buen  guiso. 

697.  Gallina  en  acedera.  — Después  de  asada  y  hecha  cuar- 
tos, rehogúese  con  tootho  y  un  poco  de  cebolla  menuda  y 
échesele  caldo  con  un  poco  de  vino,  manteca  fresca,  sal  y  pi- 


316 

mienta,  clavo,  y  demás  especia*.    Después  dé  cosida  se  re- 
duce el  caldo  y  se  pone  salsa  de  acedera. 

608.  QidHna  dorada. — Después  de  cocida  nn  poco  en  la 
olla  6  en  caldo  oon  sal,  pimienta,  cebolla  y  especias,  se  en- 
vuelve en  lonjas  de  tocino  y  se  pone  en  el  asador  4  fuego 
lento,  se  quitan  las  lonjas,  y  se  deja  el  ave  hasta  que  tome 
color,  entonces  se  unta  con  yemas  de  huevos  batidas;  y  pa- 
ra servirlas  se  hace  con  un  poco  de  azúcar  y  canela. 

699.  Gallinas  d  la  tártara. — Se  limpian  y  preparan  dos 
gallinas  rompiendo  los  huesos  de  las  piernas;  se  pone  un  po- 
co de  manteca  en  una  cazuela  oon  sal  y  pimienta  y  se  ponen 
las  gallinas  á  dos  fuegos.  Un  cuarto  de  hora  antes  de  ser- 
virlas se  agartan  y.  se  ponen  en  las  parrillas  sobre  un  fuego 
manso,  cambiándolas  de  posición  para  que  tomen  color  y 
se  les  pone  encima  la  salsa  siguiente: 

Se  cortan  en  pedazos  dos  6  tres  dientes  de  ajo,  un  poco 
de  perifollo  y  de  arégano;  se  pone  todo  en  una  cazuela  con 
mostaza,  un  poco  de  vinagre,  sal  y  pimienta  al  gusto,  se  le 
echa  un  poquito  de  aceite,  meneándolo  sin  cesar  para  que 
se  mezcle;  si  se  espesa  demasiado  se  añade  un  poco  de  vina- 
gre; luego  se  embarran  con  esta  salsa  las  gallinas  al  ser- 
virlas. 

700.  Croquetas  dé  gallina. — Se  cuece  una  gallina  y  se  de- 
ja enfriar,  se  corta  la  carne  sin  el  -pellejo  y  los  nervios;  se 
hacen  pedacitos  oon  algunos  hígados  y  hongos,  se  pone  en 
una  cazuela  una  cantidad  regular  de  manteca,  se  quita  del 
fuego  cuando  esté  á  medio  derretir,  y  se  le  añade  tres  ye- 
mas de  huevo  y  un  poco  de  mantequilla,  se  mezcla  todo  en 
una  cacerola;  se  deja  enfriar  y  se  'divide  en  proporciones 
iguales  del  tamaño  qué  se  quiera.   Se  tiene  preparada  miga 


1217 

de  pan  en  una  tabla,  te  embarran  con  ella»  laa  croquetas  y 
después  huevos  batidos  como  para  hacer  tortilla;  y  así  se 
/orma  la  masa  y  sé  pone  compacta.  Poco  antes  de  llevarlas 
á  la  mesase  echan  en  la  manteca,  que  ha  de  estar  caliente f 
y  se  sacan  en  cuanto  tomen  buen  color.  Se  ponen  en  el  pla- 
tón con  ramas  de  perejil. 

701.  Relleno  para  gallina. — Se  pican  unos  dientes  de  ajo 
menuditos,  se  pone  un  poco  de  manteca  y  agua  en  una  ca- 
zuela y  allí  se  pone  á  freír  hasta  que  sé  consuma  el  agua. 
Se  fríen  seis  criadillas,  con  una  taza  de  cebolla  picada,  me- 
dia taza  de  tomates  lavados  y  picados  para  que  se  les  caigan 
las  pepitas.  Estando  ya  fritos  se  pican  las  criadillas  y  se 
echan  en  el  recaudo  con  una  cucharada  del  caldo  en  que  se 
cocieron.  Se  le  echa  clavo,  pimienta  y  canela  todo  molido, 
un  poco  de  perejil  picado,  tomillo,  jamón  cocido  en  reba- 
nadas, alcaparras,  aceitunas  y  un  poco  de  aceite. 

Del  mismo  modo  se  pueden  guisarlas  menudencias  de  po- 
llo y  ubres  de  ternera. 

702.  Atado  de  gallina. — Se  pone  la  gallina  á  sancochar 
en  una  cazuela  con  suficiente  manteca,  y  una  cabeza  de  ajos, 
tiritas  de  jamón,  tomillo,  laurel,  orégano  y  mejorana,  sal  y 
pimienta.  Ta  que  está  sancochada  se  le  echa  un  pocilio  de 
vinagre  y  medio  cuartillo  de  vino  de  Jerez.  Se  deja  que 
tome  color  de  asado  y  luego  se  le  agrega*  un  cuartillo  de 
agua,  se  deja  secar  y  se  adorna  con  lo  que  se  quiera. 

703.  Gallina  con  arroz  á  la  pinera. — Prepárese  una  ca- 
zuela con  dos  onzas  de  manteca;  póngase  á  la  lumbre,  y 
fríanse  dos  ó  tres  jitomates,  dos  cebollas  tiernas,  seis  ajos; 
échese  después  la  gallina  partida  en  pedazos,  y  cuando  se 
haya  sofrito,  se  le  echa  jarro  y  medio  de  agua;  sazónese  de 


na 

■al  y  se  deja  hervir  hasta  que  esté  casi  cocida;  póngate  unas 
hebrítas  de  azafrán  y  un  polvo, de  pimienta;  añádase  libra  y 
media  de  arroz;  déjete  hervir  hasta  que  te  eonsuma  el  agua 
y  el  arroz  esté  casi  cocido;  apártese  y  después  de  un  cuarto 
de  hora  se  sirve. 

704.  Gallina  á  lo  vuelta  abajo.— Se  ooita  la  gallina  en  pe- 
dazos no  muy  grandes;  pónete  en  una  cazuela  con  cuatro 
onzas  de  aceite;  sazónese  de  sal;  se  fríe  basta  que  tome  un 
color  dorado,  entonces  ochante  unos  ajos  partidos  por  enme- 
dio,  unas  hojitas  de  perejil,  dos  cebollas  picadas  y  unas  yer- 
bas finas;  cuando  la  gallina  esté  frita  te  seca  y  se  pone  en  un 
plato  con  plátanos  fritos.  Hágase  salsa  italiana,  y  te  va 
cenando  poco  á  poco  por  encima  de  la  gallina,  añadiendo 
después  el  aceite  que  quedó  en  la  freidera;  adórnese  el  pla- 
to con  plátano  frito,  cortado  en  pedazos,  y  se  servirá  y  gus- 
tará mucho  este  plato. 

705.  Gallina  de  Guinea  en  pebre. — Estando  limpia  y  sin 
vientre,  se  pone  á  asar  en  unas  parrillas,  untando  muy  á 
menudo  con  manteca  derretida,  sumo  de  limón,  sal  y  ajos 
machacados;  estando  medio  asada  te  pone  en  una  cazuela, 
echando  manteca,  perejil  picado,  pimienta,  sal,  dos  ó  tres 
hojas  de  laurel,  el  unto  ó  manteca  que  sobró  del  asado,  me- 
dia taza  de  aceite  crudo  y  el  agua  suficiente  hasta  cubrirla; 
se  deja  que  hierva  hasta  que  está  blanda;  se  saca  la  gallina; 
deslíense  en  el  caldo  ocho  yemas  de  huevo,  batiéndolas  bien 
para  que  espese  el  caldo;  te  le  deja  hervir  un  poco,  y  se  echa 
por  encima  de  la  gallina,  que  estará  en  un  platón,  y  te  sirve. 

706.  Gallina  chilena.— Se  fríe  una  gallina  hecha  pedazos, 
y  después  de  bien  rehogada  te  añaden  papas  para  que  tam- 
bién se  rehoguen,  con  unos  ajos  y  cebollas.     Luego  se  le 


echa  agua  hirviendo  y  se  deja  cocer.  Antee  de  servirse  se 
deslien  un  par  de  yemas  de  huevo  con  un  poco  de  vinagre, 
teniendo  cuidado  que  no  se  corte.  Si  se  quiere  puede  aña- 
dirse unos  chícharos  6  un  poco  de  arroz. 

707.  Gallinas  gachupinas.  — Se  toman  unas  gallinas  y  unos 
lomos  crudos;  las  primeras  se  parten  en  cuartos  y  los  segun- 
dos se  rebanan  con  cebollas,  jitomates,  ajos  y  pina;  se  unta 
una  cazuela  con  manteca,  y  se  echa  una  capa  del  recaudo  di- 
cho antes,  añadiéndoles  perejil,  encima  otra  de  gallina,  lo- 
mo y  jamón,  todo  crudo,  asi  se  alterna  hasta  llenar  la  ca- 
zuela; á  cada  capa  so  le  echa  un  polvo  de  clavo,  canela,  bas- 
tante pimienta  y  vinagre;  se  pone  la  cazuela  á  dos  fuegos 
hasta  que  este*  de  sazón;  se  adorna  el  guisó  con  piñones,  pa- 
sas, almendras,  alcaparrones,  chiles,  aceitunas,  acitrón  y 
aceite. 

706.  Gallinas  cautivas  Se  cuecen  y  pica  en  el  caldo  hi- 
gaditos,  mollejas,  chorizos,  jamón  y  luego  se  muelen  camo- 
tes, jitomates,  y  se  echa  al  caldillo  clavo,  canela,  pimienta 
y  un  poco  de  culantro,  y  ya  que  está  bien  sazonado,  se  le 
echa  vinagre,  pedazos  de  pina,  ajonjolí,  aceitunas,  chiles  y 
azafrán. 

709.  Gallina  en  espinaca* — Se  cuecen  las  gallinas  con 
lomos,  jamón  y  chorizos;  se  ponen  á  cocer  espinacas  y  gar- 
banzos, se  parten  las  gallinas  en  pedazos,  se  fríe  aparte  jito- 
mate, ajos  y  chiles  verdes  y  se  echan  allí  las  espinacas  bien 
esprímidas  y  los  garbanzos,  luego  la  carne;  se  agregan  pa- 
sas, almendras,  acitrón,  huevos  duros,  plátano  rebanado, 
un  poco  de  vinagre,  camotes,  azafrán  y  todas  especias.  Ya 
que  está  sazonado  aparte,  se  le  echa  aceite  por  encima  y  se 
adorna  con  chiles  y  alcaparras. 


320 

710.  Pichones  d  la  castra. — Se  vacian  y  escaldan,  ae  lea 
vuelven  las  patas  hacia  dentro,  dejándolos  deapaea  en  agua 
fría;  se  ponen  en  una  cacerola  entre  dos  lonjaa  de  jamón 
gordo  con  caldo  de  sustancias  7  un  manojo  de  perejil  y  yer- 
bas finas;  cuando  están  cocidos  se  espuma  el  caldo  y  se  echa 
en  una  salsa,  que  se  clarífica  y  espesa. 

711.  Pichones  en  adobo. — Córtense  en  dos  pedazos  á  lo 
largo  después  de  asados,  y  háganse  hervir  lentamente  en 
un  adobo  cocido.  Cuando  se  vayan  á  freír  se  escurren  y  se 
robozan  en  una  masa  ligera,  en  la  que  entran  claras  de  hue- 
vo batidas,  y  se  echan  en  la  fritura  bien  caliente,  se  sirven 
como  todos  los  platos  de  este  género,  con  perejil  frito  por 
encima  6  por  debajo,  á  elección. 

712.  Pichones  guisados. — Se  limpian  y  extraen  loa  me- 
nudillos; friese  un  poco  de  jitomate  con  los  pichones  ente- 
ros hasta  que  estén  bien  dorados,  ócheseles  el  agua  corres- 
pondiente y  dos  tazas  de  caldo,  muélanse  los  menudillos 
con  unas  especias,  ajos  fritos  y  miga  de  pan  mojado;  deslía- 
se todo  y  se  echa  á  los  pichones,  dejando  que  den  un  her- 
vor. 

713.  Otro  modo, — Se  ponen  en  una  cacerola  entre  dos 
lonjas  de  jamón  con  caldo  de  sustancias  y  yerbas  finas,  y 
en  estando  cocidos  se  les  hace  una  salsa  con  ajo,  perejil  y 
pimienta,  todo  desleído  con  vinagre  que  se  echa  por  encima. 

714.  Pichones  con  chicharos. — Se  echan  los  pichones  en 
manteca  con  un  poco  de  tocino  en  tiras,  se  afiade  una 
cucharada  de  harina  y  se  humedecen  con  caldo,  se  pone 
perejil,  y  encima  de  todo  los  chícharos,  cociéndose  todo  á 
fuego  lento;  puede  echarse  dentro  de  los  pichones  y  antes 
de  servirse  un  poco  de  azúcar. 


221 

715.  Otro  de  pichones  can  chícharos. — Limpios  y  pelado* 
se  parten  por  la  mitad  á  lo  largo  y  se  fríen  en  manteca  su- 
ficiente con  cebolla  en  gajos,  zanahoria,  pedazos  de  jamón, 
hojas  de  laurel,  tomillo,  pimienta  en  polvo,  perejil  picado, 
sal  y  un  poco  de  agua  que  á  medida  que  se  consuma  se  le 
irá  agregando  para  que  cuezan  bien  los  piohones.  Se  oue. 
cen  chícharos,  se  les  echa  un  poco  de  sal  'de  ganado  para 
que  queden  verdes,  y  una  ves  cocidos  se  fríen  en  manteca 
y  mantequilla,  en  seo;  u ida  se  fríe  un  poco  de  harina  á  qué 
no  quede  dorada,  sino  blanca;  se  desbarata  en  el  caldo  en 
que  se  cocieron  los  pichones,,  que  se  colará  antes,  y  se  hará 
una  salsa  espesita.  Allí  se  echan  los  chícharos  que  ya  se 
habrán- cocido  algo  con  la  mantequilla,  y  luego  los  pichones 
bien  .limpios,  agregándoles  un  poco  de  perejil  picado;  y 
puesto  en  el  fuego  se  sazona  teniendo  cuidado  de  que  los 
chícharos  solo  queden  sancochados. 

•  .716.  Pichones  asados. — Se  fríe  un  poco  de  manteca,  y  en 
ella  se  revuelven  los  piohones;  échese  un  poco  de  harina 
desleída  con  vinagre,  y  se  deja  todo  hasta  que  el  ave  esté* 
bien  dorada;  añádase  después  un  pocilio  de  caldo  del  pu- 
chero, dejándolo  á  fuego  lento  hasta  que  se  quede  esta  sal- 
silla  en  la  mitad. 

717.  Pichones  á  lo  marino. — Échense  en  manteca  con  to- 
cino cortado  en  pedazos,  se  mojan  con  mitad  de  caldo  y 
vino  blanco,  y  se  añaden  chiles. 

718.  Pichones  rellenos. — Se  les  quitan  los  alones  y  pescue- 
zos, y  despuntada  la  rabadilla  se  hace  un  picado  menudo  de 
ternera,  pechuga  de  aves,  jamón  y  cebolla  frita;  huevos  y 
perejil,  pimienta  y  cominos  molidos;  rellánense  dos  picho- 
nea con  esta  masa,  y  se  cruzan  las  patas  por  encima  de  la 


van 

ciliar*  para  que  no  te  taiga  el  embutido;  después  se  envuel- 
ven en  papel  de  estraza,  y  ae  asan  en  cazuela  entre  dos  fue- 
gos lentos. 

719.  Quitado  d*  pichones. — Bien  limpios  los  pichones  se 
echan  en  una  cazuela  con  rebanadas  de  jamón,  chorizos»  un 
poco  de  manteca,  uno  6  dos  jitomates  picados,  tres  6  cuatro 
manojos  de  cebolla  en  gajos,  dos  6  tres  cabezas  de  ajos  ma- 
chacados, unas  hojas  de  laurel,  un  poco  de  tomillo  y  oréga- 
no. Todo  esto  se  fríe  muy  bien  en  la  cazuela.  Después  se  le 
echa  vinagre  criollo,  vino  oarlon  y  agua,  se  muele  claro,  ca- 
nela y  pimienta.  El  caldillo  ha  de  quedar  espeso,  y  al  llevar- 
los á  la  mesa  se  agrega  otro  poco  de  vino;  se  adorna  con  chi- 
les, aceitunas  y  alcaparras. 

720.  Otro  de  pichone*  con  nabo. — Limpios  los  pichones  se 
echan  en  una  cazuela  con  unas  rebanadas  de  jamón  y  cho- 
rizos, una  cucharada-de  manteca,  bastante  cebolla  y  unos 
dientes  de  ajo.  Se  mondan  unos  nabos  y  se. parten  en  reba- 
nadas, se  fríen  en  manteca,  se  echan  en  la  cazuela,  y  ya  que 
están  fritas  la  carne  y  cebolla,  se  le  echa  agua,  clavo,  cane- 
la y  pimienta,  todo  molido  con  un  pedazo  de  pan  frito  y  to- 
millo; ha  de  quedar  espeso  el  caldillo:  se  adorna  como  el 
anterior  y  vino  de  Jerez. 

721.  Otro  con  m  propia  sangre. — Se  echa  en  la  cazuela  un 
poco  de  vinagre  criollo  y  allí  se  van  degollando  los  pichones 
para  juntar  la  sangre.  Luego  se  echa  manteca  en  una  cazue- 
la; cuando  está  caliente  se  le  echa  cebolla  y  ajos  picados.  Ya 
que  está  bien  frito  se  deshace  la  sangre  y  se  cuela  por  una 
pichancha  y  se  echa  á  freír  en  la  cazuela  con  la  cebolla  y 
después  se  echan  los  pichones  enteros  con  unas  rebanadas 
de  jamón  y  chorizos  y  se  deja  freir  todo  muy  bien.     Agre*- 


gamela  claro,  tomillo,  canela  y  pimienta  y  unas  rebanadas 
de  pan  frito;  ha  de  quedar  espeso  el  caldillo,  se  agrega  vino 
de  Jerez,  y  se  adorna  con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

732.  Otro  con  harina  y  huevo. — Se  echa  en  una  cazuela 
un  poco  de  manteca;  cuando  está  bien  caliente  se  echan  los 
pichones  y  unas  rebanadas  de  jamón  después  de  bien  dora* 
da.  Se  echa-  un  poco  de  harina  y  ajo  molido,  cebolla  picada 
y  ya  que  se  frió  todo  se  le  echa  agua  y  un  poco  de  perejil 
fresco  picado,  clavo,  canela  y  pimienta  todo  molido.  Cuan* 
do  está  bien  cocida  la  carne  y  el  caldillo  espeso,  se  baten 
cuatro  ó*  seis  yemas  de  huevo  con  un  poco  de  zumo  de  limón 
y  se  va  echando  muy  poco  á  poco  para  que  no  se  cueza.  Sír- 
vase con  chiles  y  alcaparras, 

723.  Otro  de  pichones  con  huevo.  -Se  echan  en  una  cazue- 
la unos  ajos  picados  y  un  poco  de  manteca.  Frito  el  ajo, 
óchesele  jamón  rebanado  y  chorizos,  y  frita  la  carne  se  le 
echa  un  tanto  de  vinagre  y  otro  de  agua,  se  muele  clavo, 
canela  y  pimienta  y  unas  alcaparras  con  dos  <5  tres  yemas 
de  huevo  cocidas  y  se  echa  en  la  cazuela  en  que  está  la  car- 
ne. Se  muelen  unas  rebadadas  de  pan  bien  doradas  y  fritas 
y  se  echan  en  la  carne.  El  caldillo  ha  de  quedar  espeso.  Al 
llevarlo  á  la  mesa  se  agrega  un  poco  de  aceite  y  se  adorna 
con  chiles  y  aceitunas. 

724.  Otro  con  culantro. — Se  echan  en  la  cazuela  los  picho- 
nes con  unas  rebanadas  de  jamón,  unos  chorizos  y  una  cu- 
charada de  manteca;  se  pica  bastante  cebolla  y  unos  dientes 
de  ajo;  se  fríe  en  manteca  un  poco  de  culantro  seco  y  ya 
que  está  frita  la  cebolla  con  la  carne  se  echa  el  culantro  pa- 
ra que  todo  se  fría;  se  le  pone  después  agua  y  clavo,  canela, 
pimienta,  unas  rebanadas  de  pan  frito,  todo  molido,  una  ra- 


224 

mita  de  tomillo  y  vino  de  Jerez.  Se  deja  el  caldillo  espeto. 
Se  adorna  con  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

725.  Pichones  en  vino. — Se  matan  los  pichones  y  se 
limpian  en  seco;  se  prepara  una  sartén  con  manteca,  man* 
toquilla  y  aceite  de  comer;  se  parten  los  pichones  en  cuar- 
tos; se  parten  cebollas  en  gajos  y  dientes  de  ajo,  se  dora 
esto  junto  con  los  pichones,  se  dora  aparte  un  pedazo  de 
pan  en  solo  manteca;  después  se  muele  el  pan  junto  con  la 
cebolla  y  los  dientes  de  ajo  ya  dorados,  ya  molido  esto  se 
deslíe  en  la  sartén  en  que -se  doraron  los  pichones,  se  le 
echa  un  poco  de  vino  tinto  á  que  haga  salsa,  la  cual  no  ha 
de  quedar  ni  espesa  ni  aguada;  se  ponen  los  pichones  enci- 
ma de  la  salsa  y  se  le  echan  unas  pimientas  y  unos  clavos 
enteros  y  se  deja  á  dos  fuegos  lentos  hasta  que  esté  cocido. 

GUAJOLOTE.— Advkbtknoia.—  Al  darlosguisos'de  es- 
ta ave,  advertimos  que  no  comprendemos  en  esta  serie  los 
que  son  considerados  como  mexicanos,  porque  estos  los  re- 
servamos para  la  sección  mexicana  que  formará  una  serie 
aparte. 

726.  Sangre  de  guajolote. — Se  echa  sal  en  un  plato  y  se 
recojo  en  ella  sangre  del  guajolote;  ya  que  se  cuajó  se  echa 
manteca  en  una  sartén  y  en  ella  la  sangre  entera  como  esta, 
se  voltea  como  tortilla  de  huevos,  y  ya  que  está  frita  se  echa 
en  un  plato  con  lechuga,  aceite,  rebanadas  de  cebolla,  sal, 
pimienta  y  se  adorna  con  chiles. 

727.  Queeo  de  guajolote — Se  mata  el  guajolote  é  inmedia- 
tamente se  deshuesa  y  se  extiende  la  carne  en  una  serville- 
ta untada  de  manteca,  sal  y  pimienta.  Se  le  van  poniendo 
tiras  de  jamón  y  cuarterones  de  huevo  cocido  y  otro  polvo 
de  sal  y  pimienta:  se  enrolla  la  carne  muy  apretada  en  la 


225 

servilleta,  te  amarra  y  se  pone  á  cocer;  ya  cocida  se  saca  de 
la  servilleta,  se  rebana  y  se  adereza  con  aceite  y  vinagre. 

728.  Despojos  é  higadillo  de  guajolote. — Se  parten  en  pe- 
dazos y  se  ponen  dorante  una  6  dos  horas  en  agua  fría  para 
que  se  ponga  blanca  la  carne:  después  de  escurrirlos  bien  se 
pone  en  una  cazuela  un  pedazo  de  manteca  y  una  cucharada 
de  harina,  dando  vueltas  hasta  que  la  manteca  se  haya  de- 
rretido, humedeciéndola  en  seguida  con  un  vaso  de  agua; 
añádase  á  esto  sal,  pimienta,  nuez  moscada  rallada,  un  ma- 
no j  i  to  de  perejil  y  cebollitas  verdes.  Échense  los  despojos 
en  este  recaudo  y  déjense  cocer  tres  cuartos  de  hora;  por 
separado  se  echarán  en  la  salsa  tres  yemas  de  huevo  y  zumo 
de  limón,  agraz  6  un  roció  de  vinagre.  Ta  casi  cocidos  los 
despojos,  se  les  echa  unos  chiles  en  rajas  y  se  deja  cocer, 
tapando  la  cazuela  con  un  papel  de  estraza.  Se  adorna  con 
papas  fritas  en  rebanadas,  y  rebanadas  de  pan  tostado. 

720.  Otros  despojo*  de  guajolote. — Se  hacen  trozos  y  se  re- 
hogan con  manteca,  se  polvorean  con  harina  y  se  humede- 
cen con  caldo  6  agua,  sazonándolos  con  pimienta,  sal  y  un 
ramo  de  todas  yerbas.  Se  cuecen  añadiendo  dos  nabos  pa- 
sados por  manteca  hasta  que  hayan  tomado  color,  después 
se  escurren  y  adornan  con  papas  fritas  en  rebanadas. 

790.  Guajolote  condimentado  con  $u  propia  grasa. — Des- 
pués de  chamuscado  y  destripado,  se  le  tuercen  las  piernas 
y  se  pasa  por  manteca.  Se  pone  en  el  fondo  de  una  cacero- 
la tajadas  de  ternera  y  sobre  ellas  el  ave,  con  la  pechuga 
hacia  abajo,  cubriéndola  con  lonjas  de  tocino;  hecho  esto 
se  le  echa  caldo,  sazonándolo  con  pimienta,  sal  y  un  mano- 
jo de  yerbas.  Así  cocerá  á  fuego  manso  y  cuando  ya  lo  esté 

LA  OOCUTBBA  POBLANA. — TOM. — L    15 


226 

se  pasa  el  caldo  por  tamiz,  se  desengrasa  y  se  sirve  derra- 
mándolo por  encima  del  guajolote. 

731.  Picadillo  de  guajolote. — Se  quitan  todas  las  mem- 
branas y  tendones  de  las  carnes  del  guajolote;  cocido  el  res* 
to,  se  pica  muy  menudo  y  se  sirve  con  un  aderezo  de  pan 
tostado.  Por  encima  se  pueden  poner  algunos  huevos  es* 
trellados. 

732.  Guajolote  atado, — Después  de  limpio,  se  tiene  al  ai- 
re libro  veinticuatro  horas,  y  después  se  cuece  en  una  olla; 
cuando  este*  i  medio  cocer  se  saca  y  se  pone  en  el  asador 
con  manteca  y  un  polvo  de  sal  y  pimienta;  se  meten  unos 
clavillos  de  especia  por  el  pecho  y  piernas,  y  poniéndolo 
bien  envuelto  en  un  papel  de  estraza,  se  ata  bien  y  se  pone 
á  fuego  lento;  cuando  este*  bien  asado,  se  hace  una  salsa  con 
un  poco  de  azúcar,  zumo  de  limón,  canela,  pimienta  y  cal- 
do, que  se  le  rocia  por  encima. 

733.  Guajolote  relleno. — Hágase  un  picado  de  carne  y  ja- 
món, sal,  pimienta  y  un  par  de  huevos  con  perejil  y  ajo,  y 
también  se  ponen  ciruelas-pasas;  se  fríe  con  manteca  y  se 
rellena  el  guajolote,  después  se  asa. 

734.  Guajolote  en  papel. — Se  limpia  y  tiene  al  aire  libre 
veinticuatro  horas,  y  después  se  cuece  en  una  olla;  á  medio 
cocer  se  pone  en  el  asador  con  manteca  y  un  polvo  de  sal  y 
pimienta;  se  meten  unos  clavillos  de  especias  y  se  emruelve 
en  un  papel  de  estraza  y  se  deja  á  fuego  lento;  cuando  este' 
asado  se  hace  una  salsa  con  un  poco  de  azúcar,  zumo  de  li- 
món, canela,  pimienta  y  caldo,  que  se  le  rocia  por  encima. 

736.  Pepitoria  de  guajolote. — Después  de  limpio  con  una 
servilleta  seca,  se  pone  en  pedazos  á  rehogar  con  tocino  pi- 
cado 6  manteca,  ajo,  perejil,  sal  y  un  poco  de  pimienta; 


227 

óchesele  después  Un  poco  de  caldo  de  puchero,  y  se  hace 
una  salsa  con  clavillo  de  especia,  ajo  tostado,  perejil,  unas 
avellanas  y  una  yema  de  huevo,  deslíase  con  el  mismo  cal- 
do, y  se  echa  en  el  puchero  á  que  cueza  un  rato;  para  que 
la  salsa  no  esté*  espesa,  se  le  echará  un  par  de  yemas  de 
huevo. 

736.  Alones  de  guajolote  á  las  yerbas.  —Se  les  quitan  los 
huesos,  y  después  de  bien  desplumados  y  descañonados,  se 
escaldan  ligeramente  en  agua  hirviendo,  se  cubren  de  pe- 
dacitos  de  tooino,  que  se  pasan  de  parte  á  parte.  Se  cue- 
cen como  la  pipila  en  adobo,  cubriéndolos  con   un  papel 

.bien  empapado  en  manteca;  luego  que  estén  bien  cocidos» 
se  ponen  en  una  salsa  6  guiso  de  yerbas. 

737.  Pipila  en  asador. — Quítensela  las  tripas,  se  limpia  y 
compone;  cúbrase  con  una  capa  de  lonjas  de  jamón  magro 
si  está  muy  gorda,  y  en  caso  contrario,  méchese  con  tiritas 
de  jamón  gordo  y  cúbrase  con  un  papel  engrasado,  que  se 
quita  cuando  esté  medio  cocida,  para  que  tome  buen  color; 
sírvase  regada  de  calda 

738.  Guajolote  en  adobo. — Pélese  y  vacíese  un  guajolote 
viejo,  y  métansele  las  patas  en  el  cuerpo,  se  le  dan  unas 
vueltas  sobre  las  brasas,  cúbrase  de  lonjas  gordas  de  jamón 
bien  sazonadas,  y  envuélvase  en  un  lienzo,  que  se  cose;  pón- 
gase en  un  puchero  justo  á  su  grandor,  póngase  con  él  des- 
perdicios de  ternera,  rajas  de  jamón  y  una  pata  de  ternera; 
humedézcase  con  un  cuartillo  de  vino  blanco  6  una  capa  de 
aguardiente,  caldo,  raíces,  cebollas,  un  ramo  de  perejil  y 
yerbas  finas,  sal,  pimienta,  ajo,  laurel;  hágase  cocerá  fuego 
lento  y  vuélvase.  Después  de  cocido,  pásese  el  caldo  por 
el  tamiz  y  hágase  disminuir  hasta  que  quede  hecho  jaleti- 


228 

i»,  que  te  dejará  enfriar;  extiéndate  sobre  el  guajolote, 
coloqúese  en  el  platón  aobre  una  servilleta,  guarnecido  de 
perejil  verde.  Se  puede  también  servir  caliente,  reducien- 
do á  salsa  parte  de  la  jaletina. 

799.  Pipila  á  lo  canto. — Deapuea  de  limpia  y  preparada, 
aplástesela  un  poco  el  pecho,  vuélvansele  las  patas;  en  la 
cacerola  se  pone  manteca,  perejil,  cebolla,  chiles,  ajo,  todo 
muy  bien  picado;  en  esta  mesóla  dense  unas  vueltas  á  la 
parrilla  y  pásese  el  todo  á  otra  cacerola  conveniente  al  gran- 
dor de  ella,  donde  se  pone  ésta,  cubierto  su  pecho  con  lon- 
jas de  tocino,  y  bien  sazonada  con  sal  en  grano  y  pimienta, 
mojándola  con  un  vaso  de  vino  blanco  y  otro  tanto  de  cal- 
do del  puchero:  si  no  se  tiene  vino  blanco,  se  puede  reem- 
plazar con  medio  vaso  de  buen  aguardiente;  cuezase  á  fue- 
go lento;  y  se  añade  un  poco  de  caldo  colado  para  espesar 
la  salsa. 

740.  Dewpojoe  de  guajolote. — Se  cuecen  con  sal,  y  después 
de  dar  un  hervor,  se  fríen  con  manteca  y  un  poco  de  hari- 
na, se  echa  un  poco  de  chile  verde,  canela,  perejil  y  jamón 
picado,  se  deja  cocer  á  fuego  lento,  y  se  sirve  á  las  dos 
horas. 

741.  MewudiUoe  de  guajolote  d  la  eaiera. — Los  menudillos 
del  guajolote  comprenden  loa  alones,  las  patas,  el  pescuezo 
y  la  molleja;  después  de  bien  escaldado  y  desencadenado 
todo,  se  pone  en  una  cacerola  con  manteca,  un  manojito  de 
perejil,  cebolla,  unos  ajos,  dos  clavos,  tomillo  y  laurel;  se 
pone  al  fuego  y  se  echa  una  buena  cucharada  de  harina,  se 
añade  con  caldo  del  puchero  6  caldo  de  sastancias,  se  sazo- 
na lo  necesario  y  se  añaden  algunos  nabos,  que  se  rehogan 
antes  en  la  sartén  hasta  que  tengan  un  color  dorado,  se  po- 


229 

nen  á  cocer,  y  si  la  salea  está  demasiado  clara,  se  deja  re- 
ducir en  el  fuego, 

742.  Menudillon  de  guajolote  á  la  judia, — Preparados  co- 
mo ya  se  ha  dicho,  se  ponen  á  cocer  como  la  pipila  en  ado- 
bo; después  de  cocidos  se  fríen  unosN  nabos  en  manteca  has- 
ta que  tomen  un  buen  color  y  se  sacan  de  la  manteca;  en  la 
misma  se  echa  una  cucharada  de  harina,  se  hace  con  ellas 
una  masa,  que  se  deslíe  en  el  caldo  de  los  menudillos,  se  le 
hace  cocer  hasta  que  espese,  se  cuela  y  que  cuezan  en  esta 
salsa  los  nabos;  se  echa  un  terrón  de  azúcar,  se  colocan  los 
menudillos  en  un  platón,  se  adornan  y  cubren  con  los  na- 
bos, y  por  encima  del  todo  se  echa  la  salsa. 

643.  Quitado  de  pato.^—Se  pelan  y  destripan  los  patos,  y 
después  de  bien  lavados  y  quitada  la  rabadilla,  se  echan  en 
una  olla  con  agua  y  paja,  y  ya  que  dieron  unos  horrores  se' 
quitan  de  la  lumbre,  se  les  da  una  6  dos  lavadas  con  agua 
caliente,  después  se  parten  en  cuartos,  se  echa  manteca  en 
una  cazuela  y  allí  se  echan  los  patos  con  unas  rebanadas  de 
jamón  y  bastante  cebolla  picada  y  ajo  y  se  deja  freír  todo 
bien.  Después  se  le  echa  agua  y  un  poco  de  perejil  picado, 
tomillo  y  orégano,  y  se  muele  clavo,  canela  y  pimienta  con 
unas  rebanadas  de  pan  frito.  Se  adorna  el  platón  con  chi- 
les, alcaparras  y  aceitunas. 

744.  Otro  de  pato.  — Se  hace  lo  mismo  que  el  anterior  has- 
ta donde  se  dice  que  se  echa  la  manteca  en  una  cazuela, 
Cuando  está  caliente  se  echan  los  patos,  dos  6  tres  jitoma- 
tes y  dos  manojos  de  cebolla  y  un  poco  de  perejil  picado,  y 
esto  se  echa  con  la  carné:  ya  que  se  frió  todo  se  le  echa  ha- 
rina y  se  deja  f  reir  otro  poco;  luego  se  le  echa  agua,  se  mué* 


230 

le  clavo,  canela  y  pimienta,  le  echa  en  el  güito  y  ae  adorna 
como  el  anterior.     Ha  de  quedar  el  caldillo  espeto. 

745.  Otro  de  pato. — Se  hace  lo  mismo  que  los  anteriores. 
Se  pone  una  cazuelita  con  manteca,  se  pica  ajo,  perejil  y 
cebolla,  rebanadas  de  jamón,  y  todo  se  fríe  junto  con  el  pa- 
to. Se  pican  unos  nabos  delgados  y  se  fríen  con  manteca; 
junto  con  claro,  canela  y  pimienta  y  se  echa  otra  vez  don- 
de está  todo;  se  le  agrega  agua  para  que  sazone;  se  rebanan 
otros  nabos  y  se  echan;  se  fríen  rebanadas  de  pan,  se  mue- 
len y  se  le  añaden;  ha  de  quedar  el  guiso  espeso  y  antes  de 
apearlos  de  la  lumbre  se  les  pone  vino  de  Jerez.  Se  ador- 
na como  los  anteriores. 

746.  Escabeche  de  patos. — Después  de  cocidos  con  paja  y 
cortadas  las  rabadillas,  se  limpian  y  enjugan  con  un  trapo, 
se  deshuesan  y  revuelcan  en  harina,  se  fríen  en  manteca, 
se  sacan  y  se  van  poniendo  en  capas  dentro  de  una  olla. 
Entre  dos  capas  de  pato  se  echa  una  de  sal  y  pimienta,  yer- 
bas aromáticas  en  polvo,  ajos  fritos,  aceite  y  vinagre;  se  ta- 
pa la  olla  y  se  deja  en  infusión  por  tres  ó  cuatro  horas;  se 
tapa  muy  apretada  con  una  tapa  de  palo  y  se  deja  cinco  ó 
seis  días. 

747.  Pato  en  asador. — Prefiérase  un  pato  hembra,  des- 
plúmese y  queme  en  llama  de  papel,  quítense  las  alas  y  el 
pescuezo,  córtense  los  extremos  de  las  patas,  vuélvanse  ha- 
cia fuera,  y  se  ata  antes  de  ponerlo  en  el  asador;  frótese  con 
su  mismo  hígado  y  se  envuelve  en  un  papel,  que  se  quita 
cuando  esto  casi  asado.  Se  sirve  bien  caliente,  con  dos  li- 
mones enteros. 

748.  Pato  en  aceituna*. — Después  de  bien  preparado  y 
arreglado,  se  le  dan  unas  Vueltas  en  una  cacerola  con  pe- 


231 

dazos  de  tocino,  se  echa  una  media  libra  de  aceitunas, 
échense  en  la  cacerola  donde  está  el  pato,  y  se  dejan  unos 
cuantos  min  utos.     Se  sirve  el  pato  rodeado  de  las  aceitunas. 

749.  Pato  en  nabos  á  lo  cauro. — Preparado  como  el  ante- 
rior, póngase  un  poco  de  manteca  en  la  cacerola,  y  en  ésta 
se  dan  unas  vueltas  al  pato,  y  algunos  navos;  en  seguida  se 
retiran  y  en  la  manteca  se  echa  una  cucharada  de  harina, 
se  hace  enrojecer  esta  mésela,  que  se  añade  con  caldo  del 
puchero,  se  vuelven  aponer  el  pato  y  los  nabos  con  un  ra- 
mito  de  perejil,  sal  y  pimienta;  si  los  nabos  estuviesen  ya 
tiernos,  no  deberán  echarse  hasta  que  el  pato  esté*  casi  co- 
cido; hecho  el  guiso,  se  deja  menguar  si  es  necesario,  y  sír- 
vase todo  junto. 

760.  Pato  en  chícharos  y  otros  legumbres, — Luego  que  es- 
té* el  pato  preparado  y  cocido  como  está  indicado  para  el 
pato  en  salsa,  se  sirve  lo  mismo  y  se  cubre  con  un  guiso  de 
chícharos. 

Empléese  el  mismo  método,  para  el  pato  con  cebollas. 

751.  Ganso  en  asador. — Escójase  uno  joven  y  que  tenga 
su  gordo  bien  blanco,  desplúmese  y  pásese  por  las  llamas; 
te  le  quitan  los  alones  y  las  uñas,  se  ata  dejándole  las  pa- 
tas, se  pone  en  el  asador  en  seguida  y  se  asa.  Es  menester 
haces  salir  el  jugo  de  las  pechugas,  pinchándole  con  un  cu- 
chillo. 

762.  Ganso  relleno  y  asado  d  la  inglesa. — Prepárese  como 
el  anterior,  y  llénese  el  cuerpo  con  una  mezcla  hecha  con  su 
hígado  picado,  cebollas  en  pedacitos  y  un  polvito  de  salvia 
picada,  todo  bien  mezclado,  rehogado  en  manteca  hasta  que 
tome  color  dorado.  Se  pone  en  el  asador,  y  después  de  asa- 
do se  sirve  con  jugo  de  ternera  6  vaca. 


333 

753.  Oaneo  relleno  de  castañas  y  otada — Prepárete  como 
queda  dicho,  rehogúese  tu  hígado  picado  en  manteca  oon 
una  cebolla  en  pedacitos,  añádate  suficiente  cantidad  de  cas- 
tañas preparadas  como  se  ha  dicho  para  el  pura  de  éstas. 
Sazónete  esta  mezcla  á  buen  gusto  y  llénese  con  ella  el  cuer- 
po del  ganso,  métasele  hacia  dentro  la  rabadilla  y  cósase  por 
el  vientre  y  por  la  vejiga;  cinco  cuartos  de  hora  antes  de  ser- 
Tirio  se  pone  en  el  asador.  Obsérvese  el  mismo  grado  de 
asado  que  si  no  estuviera  relleno. 

754.  Ganseen  adobo. ^-Tómese  con  preferencia  un  ganso 
ya  viejo,  vacíese  y  sujétensele  las  patas  dentro  del  cuerpo, 
escáldese  y  desencafiónese;  se  mecha  en  seguida  todo  su  cuer- 
po con  tiras  de  tocino  envueltas  en  pan  rallado  y  sazonadas 
con  perejil,  cebollas,  ajos,  todo  bien  picado;  una  hoja  de 
laurel,  tomillo,  basílica,  casi  reducidos  á  polvo,  sal,  pimien- 
ta y  nuez  moscada;  después  de  mechado  se  ata  y  coloca  en 
una  olla  de  su  medida  con  dos  vasos  de  agua,  dos  de  vino 
blanco,  medio  de  aguardiente,  cebollas  y  zanahorias,  sal  y 
pimienta;  tápese  bien  la  olla  y  hágase  cocer  á  fuego  lento 
por  espacio  de  cuatro  horas:  concluido  de  cocer,  póngase  el 
adobo  en  un  platón;  si  la  salsa  está  muy  clara,  redúzcase  y 
riégúese  con  ella  el  ganso,  después  de  guarnecido  c >n  zana- 
horias y  cebollas  cocidas  con  el  mismo.  También  se  puede 
dejar  enfriar,  regarla  con  la  misma  salsa  y  no  servirlo  hasta 
que  ésta  esté  hecha  jaletina:  pero  este  método  no  es  el  mas 
usado.     Se  prefiere  siempre  el  ganso  caliente. 

755.  Ganso  para  viajeros. — Para  asarlos  seles  untará  una 
salsa  hecha  de  manteca,  ajo  machacado,  sal,  pimienta  y  agrio 
de  limón,  y  después  de  asados  se  rociarán  oon  aguardiente 
tibio. 


233 

756.  Guisado  de  agachonas, — Después  de  peladas  las  aga- 
chonas sin  lavarlas,  se  asan  en  una  parrilla,  luego  se  sacan 
las  tripas  y  se  muelen  con  clavo,  canela  y  pimienta.  Se  pi- 
ca bastante  cebolla  y  ajo,  se  fríe,  y  ya  que  está  bien  frito 
se  le  echan  las  tripas  molidas  y  un  poco  de  caldo  de  1*  olla, 
antes  de  echarle  azafrán,  si  es  que  se  le  echa.  Se  ponen 
luego  las  agachonas  en  el  frito  á  que  se  cuezan.  Se  agrega 
un  poco  de  tomillo,  unas  hojas  de  laurel,  bastante  vino  car- 
Ion,  unas  rebanadas  de  pan  tostado  y  se  colocan  abajo  del 
platón  y  encima  las  agachonas. 

757.  Otro  dt  agachonas.— Se  pelan  y  abren  y  se  juntan 
las  tripas,  mollejas  é  hígados.  Se  echa  manteca  en  una  ca- 
gúela y  allí  se  echan  las  agachonas  con  pedazos  de  jamón, 
bastante  cebolla  picada  muy  menuda,  un  poco  de  ajo  tam- 
bién picado.  Las  tripas,  mollejas  é  hígado,  después  de  la- 
vados y  molidos  se  fríen  y  se  echan  en  la  cazuela  con  un  po- 
co de  vino  carlon,  clavo,  canela,  pimienta  y  un  poco  de  to- 
millo. 

758.  Tórtolas  al  minuto.— Se  despluman,  vacian  y  arre- 
glan una  docena  de  tórtolas,  se  les  dá  una  vuelta  en  la  ca- 
cerola en  manteca  y  sal;  cuando  hayan  tomado  color,  aña- 
dir chile,  ajos  y  perejil  picados,  un  polvo  de  harina,  vino 
blanco  y  caldo;  luego  que  la  salsa  empiece  á  cocer  se  sacan 
las  tórtolas,  y  se  sirven  con  cortezas  de  pan  fritas. 

759.  Tórtolas  en  salmorejo  d  lo  casero.— Se  toman  tórto- 
las asadas  y  frías,  se  les  quita  la  cabeza  y  lo  interior  del 
vientre,  las  mollejas  se  arrojan,  y  lo  demás  se  muele,  se  des- 
líe lo  machacado  en  el  caldo  del  puchero,  se  cuela  por  un 
cedazo,  se  sazona  lo  colado  con  sal,  pimienta  en  grano  y  un 


234 

poco  de  agraz;  en  esta  salsa  se  calientan  las  tórtolas  sin  de- 
jarlas cocer,  y  se  sirven  con  cortezas  de  pan  fritas. 

760.  Tórtola*. — Se  destripan  y  se  lavan:  se  fríe  jitomate 
picado,  ajo  y  cebolla;  ya  que  está  á  medio  freír  se  echan  allí 
las  tórtolas  á  que  se  sancochen  también  y  se  echa  un  poco 
de  pan  dorado  en  manteca,  clavo,  canela  y  pimienta  en  po- 
ca cantidad,  todo  molido,  tomillo,  laurel  y  mejorana;  se  echa 
el  agua  suficiente  para  que  se  oueza  y  ya  que  están  cocidas 
y  quedan  de  un  espeso  regular  se  les  revuelven  chícharos 
cocidos  para  servirlas. 

7C1.  Paloma»  torcaza* — Desplumadas,  limpias  y  quitado 
el  vientre,  se  sofríen  en  una  cazuela  con  manteca  y  sal;  á 
medio  sofreír  se  les  echa  avellanas  tostadas  machacadas,  un 
poco  de  zumo  de  limón,  un  polvo  de  pimienta,  desleído  to- 
do esto  con  dos  tazas  de  caldo  del  puchero;  se  deja  al  fuego 
para  que  acaben  de  freirse  y  tomen  el  gusto  del  machacado. 

762.  Guisado  ds  chotlos. — Se  pone  á  hervir  un  poco  de 
agua  y  bastante  vinagre,  un  poco  de  aceite,  sal,  claro,  pi- 
mienta y  canela  todo  molido;  se  deja  hervir  hasta  que  que- 
de solo  la  manteca;  ¿liando  se  está  friendo  se  le  echa  cebo- 
lla, ajo  y  perejil  picados,  jr  se  le  añade  pan  rallado  antes  de 
servirse. 

763.  Quitado  de  chorlos. — Se  pica  mucha  cebolla,  perejil, 
un  poco  de  ajo  y  bastante  pan  rallado,  sal  y  pimienta  moli- 
da. Todo  esto  se  mezcla  y  se*en vuelven  en  ello  los  chorlos, 
echándoles  tomillo  por  dentro.  Se  envuelven  los  chorlos  en 
papeles  y  se  ponen  en  la  parrilla,  y  á  fuego  manso  se  voltean 
para  que  se  asen. 

764.  Chorlos  rellenos.— Se  abren  por  debajo  de  la  rabadi- 
lla cuando  están  limpios  y  desplumados,  para  poder  sacar 


236 

los  intestino*,  menudillos,  etc.  Todo  lo  extraído  se  pica  con 
un  poco  de  tocino,  perejil,  ajo,  sal  y  pimienta;  con  esta,  ma- 
sa se  llenan  los  chorlos,  y  cubiertos  con  lonjas  de  tocino  del- 
gadas, se  asan  á  fuego  lento. 

765.  Charlo»  asado* — Extraídos  los  menudos,  se  pican, 
menos  la  molleja,  con  tocino,  sal,  pimienta,  perejil  y  ajo,  y 
con  esta  masa  se  rellenan  las  ave»;  después  se  envuelven  en 
tocino  y  se  asan  rociándolas,  recibiendo  en  rebanadas  de  pan 
el  jugo  que  de  ellas  se  desprende;  sírvanse  sobre  estas  mis- 
mas rebanadas  con  una  salsa  picante. 

766.  Codornices  en  chícharos. — Hágase  cocer  en  una  ca- 
cerola con  una  rebanada  de  ternera  y  otra  de  jamón,  zana- 
horias, cebolla  y  un  raniito  de  yerbas  aromáticas;  cúbran- 
se en  seguida  con  lonjas  de  tocino  y  papel  engrasado,  pón- 
gase fuego  por  encima  y  debajo,  y  después  de  quitado  el 
caldo  se  echan  chícharos  cocidos  con  jamón. 

767.  Codornices  asadas. — Se  las  dará  una  vuelta  en  el  asa- 
dor primero.  Téngase  preparada  una  cazuela  al  fuego  con 
manteca,  en  la  que  se  echará  sal,  un  poco  de  pan  rallado, 
un  poco  de  pimienta  y  por  cada  dos  codornices  una  yema  de 
huevo;  se  las  da  de  este  batido  con  unas  plumas,  y  se  revuel- 
ven hasta  que  estén  doradas. 

768.  Tordos  d  la  inglesa. — Después  de  limpios  se  untan 
los  tordos  cubriéndolos  con  papel,  y  se  ponen  á  asar  luego 
que  están  tiernos;  se  les  unta  con  manteca  para  que  se  do- 
ren, echándoles  una  miga  de  pan  y  sal  molida,  sirviéndo- 
los con  salsa  picante. 

769.  Tordos  en  escabeche. — Quítenseles  la  cabeza  y  las  pa- 
tas, se  les  pondrá  en  las  parrillas  6  asador  para  medio  tos- 
tarlos. En  esta  forma  se  ponen  en  vinagre  con  hojas  de  lau- 


236 

reí,  y  bastantes  especias.  Pónganse  después  en  ana  vasija, 
echándoles  salmuera  caliente  y  cubriéndolos  con  una  capa 
de  grasa.  Ciérrese  la  vasija  con  una  vejiga  6  pergamino,  y 
se  pondrán  en  un  sitio  fresco.  De  este  modo  se  conservan 
mas  de  un  afio. 

770.  Quitado  de  perdices.  — Bien  limpias  y  lavadas  las  per- 
dices se  ponen  á  dorar  en  la  parrilla  por  uno  y  otro  lado; 
cuando  lo  están  se  echan  en  una  olla  con  aceite,  dos  cabe- 
zas de  ajo  enteras,  bastante  perejil  picado,  seis  clavos  ente- 
ros, seis  pimientas  enteras  y  sumo  de  naranja  agria,  según 
la  cantidad  que  sea,  de  modo  que  quede  temi-agrío,  una 
rebanada  de  jamón  y  se  pone  á  la  lumbre  para  que  se  fría. 
As(  que  el  perejil  está  frito  se  le  echa  agua  caliente  necesa- 
ria para  que  se  cueza:  á  medio  cocer  se  le  echa  harina  para 
que  espese,  meneándolo  para  que  no  haga  bolas  y  se  sirve 
espeso. 

771.  Guisado  de  perdiz  ó  gallina  de  Quinfa. — Aceite  y  vi- 
nagre en  igual  cantidad,  dos  cebollas  enteras,  una  cabeza 
de  ajo,  cuatro  granos  de  pimienta  enteros.  Se  pone  en  una 
olla,  tapándola  con  un  papel  y  encima  una  tasa  con  agua,  y 
se  menea  de  cuando  en  cuando  con  la  misma  olla. 

772.  Boyeros  ó  codornices, — Después  de  limpias  y  desven- 
tradas,  se  sobreasan  en  unas  parrillas  á  muy  poco  fuego  y 
ñor  un  pequeño  rato;  échese  en  una  cazuela  con  manteca 
;  sal;  frfense;  se  sacan,  en  el  caldo  que  dejaron  se  fríen 
seis  ajos,  cebollas,  perejil,  todo  picado;  échese  un  vaso  de 
vino  seco  y  especias  finas;  se  echan  las  codornices,  y  se  les 
deja  rehogar  y  hervir  á  fuego  lento  como  media  hora.  Se 
sirven  después. 

773.  Perdis  á  ¡a  catalana.— Limpia  ya  la  perdis,  se  hace 


237 

rehogar  en  una  cazuela  con  manteca;  te  taca  la  perdiz  y  á 
la  miama  manteca  en  que  te  frió  se  lo  echa  caldo,  sal,  pi- 
mienta y  todas  yerbas,  y  se  deja  hervir  de  nuevo.  Be  echa 
la  perdiz  y  se  pone  á  cocer!  mientras  se  fríen  aparte  dos 
puñados  de  ajos,  y  en  otra  cazuelita  una  naranja  agria  cor- 
tada en  ruedas.  Un  cuarto  de  hora  antes  de  servirse  se  mez- 
cla todo  para  qne  acabe  de  cocerse. 

774.  Perdices  en  asador, — Después  de  desplumadas,  va- 
ciadas y  arregladas,  cúbrase  su  pecho  con  rodajiUa  de  li- 
món, sin  corteza  ni  pepitas,  y  después  con  lonjas  de  tocino» 
envuélvanse  en  papel  engrasado  y  pónganse  en  el  asador. 
8e  sirve  con  jugo  claro  6  zumo  de  limón  ó  naranja. 

775.  Perdices  rellenas  asadas.  —Hágase  un  relleno  con  su 
hígado,  tocino  raspado,  sal, perejil  y  cebollas  picadas,  mé- 
tase este  relleno  en  el  cuerpo  y  cuezase;  en  seguido  S3  vuel- 
ven las  patas  sobre  el  pecho,  se  rehogan  en  la  cacerola  con 
manteca,  y  después  se  ponen  á  asar  en  el  asador.  Se  sirven 
con  la  misma  salsa  que  las  precedentes. 

776.  Perdices  en  parrilla. — Pártanse  en  dos  pedazos  por 
los  ríñones,  aplástense  después  de  asadas  y  ya  fritas,  rehó- 
guense  en  la  cacerola  con  un  poco  de  manteca  y  buen  tazo* 
namiento,  cuidando  de  volverlas  por  los  dos  lados;  pongan* 
se  después  sobre  la  parrilla,  engrásense  y  póngaseles  para 
servirlas  una  salsa  á  la  pebre  ó  de  naranja.  ' 

777.  Picado  de  perdices. — Después  de  quitadas  las  mem- 
branas y  tendones,  y  de  haberlas  untado,  se  asan;  luego  se 
pica  su  carne  muy  menudamente,  se  hacen  rehogar  en  una 
cacerola  con  manteca,  chiles,  perejil  y  ajos,  y  se  añade  una 
cucharada  de  harina.  Cuando  todo  está  bien  mezclado  se  le 
•cha  caldo  y  vino  blanco!  se  pone  en  esta  salsa  el  picadillo, 


238 

y  Be  hace  cocer  sin  que  hierva.    Se  sirve  con  rebanada*  de 
pan  tostado. 

778.  Perdices  á  la  inglesa. — Se  abren  las  perdices  desde 
la  rabadilla  hasta  el  bache,  después  de  desplumadas,  des- 
tripadas, chamuscadas  y  vueltas  per  las  patas;  se  les  aplana 
con  un  machete,  se  echan  en  un  adobo  de  aceite  para  po- 
nerlas en  parrillas  á  un  fuego  vivo,  y  se  sirven  con  una  sal- 
sa de  pimienta  ú  otra  cualquiera. 

779.  Salmorejo  de  perdices. — 8e  cortan  los  miembros  de 
perdices  asadas  y  frías,  se  les  quita  el  pellejo  y  caliéntense 
lentamente  en  el  caldo  de  sustancias  6  del  puchero.  Mien- 
tras tanto  se  hace  hervir  aparte  vino  con  ajos  verdes  pica- 
dos, cortesas  de  limón  y  un  poco  de  española,  dejándolo 
menguar  la  mitad;  coloqúense  en  el  platón  los  miembros  de 
las  perdices  llenando  los  huecos  con  cortesas  de  pan  fritas, 
y  riegúese  el  todo  con  la  salsa  dicha. 

780.  Perdices  con  criadilla». — Se  cortan  en  pedazos  grue- 
sos las  criadillas,  se  pasan  por  manteca  con  chiles,  y  espe- 
cias, mezclando  carne  picada  y  machacada  de  alguna  ave; 
rellenando  con  este  picado  las  perdices,  se  cuecen  y  se  lea 
añade  una  salsa  de  criadillas. 

781.  Codornices  y  perdices  asadas. — Después  de  limpias 
se  las  da  una  vuelta  en  el  asador.  Se  tendrá  una  cazuela 
al  fuego  con  manteca,  en  la  que  se  echará  sal,  un  poco  de 
pan  rallado,  un  polvo  de  pimienta  y  una  yema  de  huevo  por 
cada  dos  codornices,  se  les  va  dando  con  este  batido  con 
una  pluma,  revolviéndolas  hasta  que  estén  bien  doradas. 
Del  mismo  modo  se  preparan  las  perdices. 

782.  Perdices  asadas  con  sardinas. — Después  de  limpias 
se  les  mete  dentro  del  cuerpo  dos  sardinas  bien  limpia* 


239 

sin  caben ;  se  asan  con  manteca  6  tocino,  y  ai  hubiese  jito- 
mates se  echan  por  encima  6  sumo  de  limón,  un  polvo  de 
pimienta,  aal  y  perejil;  se  asan  en1  re  dos  fuegos,  y  al  tiem- 
po de  servirlas  se  las  quita  las  sardinas. 

783.  Perdices  en  salsa, — Bien  limpias  y  untadas  de  man- 
teca se  sobreasan  en. parrillas;  luego  se  ponen  en  una  cazue- 
la con  perejil,  pimienta,  sal,  aceite  crudo,  hojas  de  laurel, 
unas  ruedas  de  limón  6  naranja,  ajos  machacados  y  caldo 
que  las  cubra;  cuando  estuvieren  cocidas  se  apartan,  y  por 
cada  ave  se  pone  una  yema  de  huevo  batida. 

784.  Perdices  estofadas. — Después  de  limpias  se  sobreasan 
en  las  parrillas  y  se  acomodan  en  una  cazuela  con  perejil  y 
pimienta,  sal,  aceite  crudo,  hojas  de  laurel,  unas  ruedas  de 
limón  6  naranja,  ajos  y  agua  6  vino  que  las  cubra.  Guando 
estén  cocidas  se  apartan  y  sirven. 

785.  Perdices  estofadas  d  la  española. -r Desplumadas  y 
limpias,  se  rehogan  y  se  ponen  en  una  olla  proporcionada, 
con  jamón  frito  cortado  en  pedazos,  cebolla  picada  gruesa 
en  abundancia,  los  ajos  machacados,  especias  de  toda  clase, 
manteca  y  vino  blanco.  Así  se  pone  á  cocer  á  fuego  lento, 
y  encima  de  la  olla  una  cazolita  con  agua  sobre  un  papel 
de  estraza. 

786.  De  otro  modo. — Se  rehogan  en  una.  olla  proporcio- 
nada con  aceite,  cebolla  picada  gruesa,  una  cabeza  de  ajos 
entera  y  especias;  después  que  está  bien  rehogada  se  le  aña- 
de vino  blanco  6  vinagre;  tápese  la  olla  con  un  papel  de  es- 
traza, y  póngase  encima  una  cazuela  pequeña  llena  de  agua. 

787.  Perdices  escabechadas. — Después  de  limpias,  se  fríen 
en  aceite;  á  medio  freír  se  echan  en  vinagre  con  hojas  de 
laurel,  ajo  majado  y  especias;  pónganse  en  una  vacija  y  se 


340 

le  echa  salmuera  y  por  encima  aceite;  te  tapa  hermética* 
mente,  y  as  coloca  en  sitio  fresco. 

788.  Guisado  de  perdiee*  y  codorniee*. — Se  fríe  tocino  en 
pedazos,  y  después  se  retiran  estos,  en  cuya  sustancia  se 
fríen  estas  ares;  se  pone  después  en  un  puchero,  y  con  la 
misma  grasa  fríase  cebolla  y  perejil  machacado;  échese  un 
vaso  de  vino  blanco  y  especias  y  que  cueza  á  fuego  lento, 
bien  tapada  la  boca  del  puchero. 

789.  Frito  de  pájaro*. — Se  pelan,  se  cortan  las  patas  y 
la  mitad  de  los  alones  y  se  fríen  sin  abrirlos,  con  manteca, 
■al,  tomillo,  pimienta  y  perejil  picado. 

790.  Ave*  frita*  en  adobx — Se  preparan  en  adobo  com- 
puesto con  vinagre,  caldo,  sal,  perejil,  cebollas,  ajos  ma- 
chacados y  laurel;  pónganse  loa  trozos  de  un  ave  deshuesa- 
da y  cocida  de^dia  antes,  y  se  tienen  en  adobo  dos  6  mas 
horas  sobre  ceniza  caliente;  se  sacan,  escurren  y  envuelven 
en  harina,  se  fríen  y  se  turren  con  perejil. 

791.  Croqueta*  de  ases. — Se  quitan  los  tendones  de  un  ave 
atada,  se  pican  menudos  con  miga  de  pan,  empapada  en  cre- 
ma y  yema  de  huevo;  cuando  está  bien  batido  y  sazonado, 
se  harán  unas  bolitas,  que  se  envuelven  en  miga  de  pan;  en 
seguida  se  humedecen  en  huevo  batido  y  se  vuelven  á  em- 
panar; se  fríen  y  sirven  en  pirámides,  con  perejil  frito  de- 
bajo. 

792.  Pepitoria  de  menudiüo*  de  ate. — Con  los  alones,  mo- 
llejas, crestas,  pescuezos  é*  higadillos  de  las  aves  se  hace  una 
pepitoria,  f riéndolas  en  manteca  con  cebolla  y  jitomates;  des- 
pués se  machacan  ajos,  pimienta,  sal,  clavillo,  canela  y  pe- 
rejil; cuando  este*n  cocidos  y  menguada  la  salsa,  se  echa  la 


241 

de  avellanas,  con  la  cual  dará  un  horror,  y  después  se  pone 
ácido  de  limón. 

703.  Albondiguillas  de  ave. — Tómense  pechugas  de  ave  y 
piqúense  menudas  con  gordura  de  gallina,  mézclese  con  el 
picado,  pan  en  remojo  y  yemas  de  huevo  cocido,  sal,  pimien- 
ta y  canela,  se  bate  todo  en  huevo  crudo,  dándole  la  consis- 
tencia suficiente,  se  hacen  las  albondiguillas  redondas,  em- 
panándolas al  rededor,  y  después  de  fritas  se  cuecen  en  sus- 
tancia de  aves  y  se  echa  salsa  blanca. 

794.  Higadillo*  de  ave  ton  arroz. — Se  cojen  los  higadillos, 
yemas  y  sangre  de  las  aves,  se  fríen  y  cuando  están  se  une 
con  el  arroz  y  se  deja  rehogar,  se  echa  caldo  y  un  poco  de 
salsa  española;  después  se  machaca  un  higadillo,  y  se  deja 
hasta  que  se  espese  algo. 

795.  Salpicón  de  aves.  — Se  parte  un  ave  después  de  cocida, 
y  quitándole  la  carne,  se  pica  grueso,  se  pone  en  adobo  con 
sal,  pimienta  y  vinagre.  Después  de  algunos  instantes  se 
adereza  con  lechuga,  pepinillos,  huevos  duros,  todo  picado, 
y  tiras  de  anchoas,  echando  por  encima  la  sustancia.  Otros 
lo  cortan  todo  en  tiras. 

796.  Torrajas  de  aves. — Se  quitan  de  las  carnes  de  los  po- 
llos todas  las  membranas  y  tendones,  se  pican  con  migas  de 
pan  humedecido  en  clara  y  yema  de  huevo;  cuando  todo 
está  bien  incorporado,  se  sazona  y  se  forman  albondiguillas, 
que  se  rebozan  con  miga  de  pan;  se  embozan  otra  vez  con 
huevo,  y  se  frien  y  sirven  con  perejil  igualmente  prepa- 
rado. 

797.  Crestas  y  rifiones  de  aves.  — Se  cortan  las  primeras'por 
su  extremidad,  y  6  fin  de  limpiarlas  y  que  desaparezca  la 
sangre  que  pueden  todavía  contener,  se  lavan  diferentes  vo- 
la COCimtlLA  POBLANA. — TOM.  X. — 16. 


243 

ees  en  agua  calienta,  y  te  retiran  de  ella  cuando  se 
qne  se  levanta  el  pellejo;  ae  limpian  con  una  servilleta 
da  sin  romperlas,  y  se  hacen  cocer  en  una  olla  de  caldo  algo 
grueso;  se  .añade  zumo  de  limón  y  no  se  mezclan  los  ríñones 
hasta  que  están  ya  perfectamente  cocidas  las  crestas. 

798.  Quitado  de  higadülcu. — Se  toman  enteras  después 
de  haber  separado  la  hiél  con  precaución  y  las  venillas  vi- 
llares 6  amargas;  y  cuando  se  hayan  limpiado  por  algunos 
minutos  en  agua  hirviendo,  se  ponen  en  una  cazuela  con 
cantidad  suficiente  de  esencia  6  buen  caldo  y  un  vaso  de 
buen  vino  blanco;  se  sazona  después  con  un  manojo  de  pe- 
rejil,  cebolletas,  un  poco  de  ajo  y  pimienta,  y  al  cabo  de 
media  hora  se  las  desengrasa  para  servirlas  como  de  en- 
trada. 

799.  Advertencia, — Las  aves  que  tienen  pellejo  mas  del- 
gado y  blanco  son  generalmente  las  mas  delicadas;  es  pre- 
ciso desplumarlas  luego  que  se  les  ha  matado  y  destriparlas 
en  seguida,  aplastándolas  el  espinazo;  después  se  queman 
unos  papeles  y  se  chamuscan,  se  destriparán  sin  estropear- 
las, haciendo  una  incisión  debajo  del  muslo,  y  si  acontecie- 
se que  se  reventase  la  hiél  se  lavará  en  seguida  todo  el  in- 
terior con  agua  hirviendo;  las  patas  se  chamuscarán  fuerte- 
mente para  quitarles  la  piel  escamosa  que  las  cubre,  estre- 
gándolas con  una  servilleta;  también  se  les  corta  el  pico  de 
abajo  y  la  puntita  de  los  alones. 


243 


PESCADOS. 

BACALAO. 

800.  Bacalao  guuado. — Cortado  en  trozos,  se  tiene  en 
agua  hasta  que  se  desale,  Tañándola  á  menudo,  se  cuece  y 
se  pone  á  escurrir  en  una  tabla,  se  fríe  cebolla  y  jitomate 
con  abundancia  y  se  acomodan  los  trozos  en  una  cazuela  pro- 
porcionada y  se  extienden  sobre  ella,  se  les  echa  encima  la 
cebolla  y  el  jitomate  con  perejil,  pimienta  y  ajos  machaca- 
dos, prosiguiendo  así  con  los  demái  trozos,  hasta  llenar  la 
vasija.  Después  se  echa  agua;  y  cuando  cubra,  se  hace  que 
de*  un  par  de  hervores  y  se  sazona  con  sal,  sin  otra  ninguna 
especia.  También  se  compone  el  bacalao  del  modo  siguiene: 
Se  pone  en  la  cacerola  con  ajos  picados,  dos  yemas  batidas 
y  dos  cucharadas  de  crema  6  nata  de  leche.  Se  pone  sobre 
una  hornilla  que  no  tenga  mucho  fuego,  removiéndolo  con- 
tinuamente y  echándole  poco  á  poco  media  libra  de  aceite, 
de  modo  que  el  bacalao  se  la  absorva  casi  toda,  y  cuando 
parezca  que  está  en  su  punto  se  sirve,  guarnecido  el  platón 
con  tostadas  de  pan  frito. 

80L  Bacalao  á  ¡a  tnaitre-dhóUL — Póngase  á  remojo  en 
igual  cantidad  de  agua  que  de  leche,  escáldese  en  seguida 
dará  quitarle  el  pellejo  con  mas  facilidad.  Después  de  bien 
preparado,  póngase  á  cocer  en  agua  fría.  Se  cuidará  de  vol- 
verlo cuando  empiece  á  hervir  y  de  no  tardar  en  sacarlo.  Se 
«acurre  bien  y  se  pone  en  el  platón,  se  cubre  con  una  salsa 


244 

á  la  maitre-d'hótel,  en  la  que  se  echan  unai  gotas  de  limón 
y  sírvase  en  seguida. 

802.  Bacalao  á  laprovcnatal — Se  desala  el  bacalao  y  des- 
pués se  cuece;  se  parte  en  lonjas  y  se  pone  en  una  cazuela 
embarrada  de  mantequilla;  se  le  echa  encima  cebolla,  pere- 
jil y  ajo  todo  picado  muy  menudo,  añadiéndole  pimienta,  y 
nuez  moscada,  y  encima  de  esto  se  pone  mas  bacalao,  que 
se  baña  de  aceite,  y  sobre  esto  otra  capa  igual  á  la  primera 
que  se  puso  en  la  cazuela;  sebre  el  bacalao,  que  ha  de  que- 
dar encima,  se  pone  una  capa  de  miga  de  pan  empapada  en 
aceite  y  se  pone  á  freir  á  dos  fuegos  mansos  hasta  que  tome 
color. 

803.  Otro  d  la  provmzal — Póngase  un  trozo  de  bacalao 
en  agua  fría,  y  déjesele  estar  veinticuatro  horas  para  desa- 
larlo y  después  se  pone  á  cocer  en  una  olla,  retirándolo 
cuando  principia  á  hervir;  se  pondrá  en  seguida  en  una  ca- 
zuela manteca,  aceite,  ajo  y  perejil,  que  se  dejará  desleír  á 
fuego  manso;  en  el  ínterin  se-  limpia  el  bacalao  y  se  corta  en 
pedazos,  póngase  en  la  cazuela,  y  de  tiempo  en  tiempo  se 
le  va  echando  un  poco  de  aceite,  manteca  ó  leche,  y  cuan- 
do esté  ya  espeso  se  cuidará  de  menear  mucho  la  cazuela  so- 
bre el  fuego,  con  lo  cual  se  consigue  que  el  bacalao  se  re- 
duzca á  una  especie  de  nata;  este  es  un  guiso  exquisito. 

804.  Bacalao  á  la  provincial. — Después  de  preparado  co- 
mo ya  queda  indicado,  y  cocido  tómese  el  platón  en  que 
se  ha  de  servir,  póngase  en  él  ajos  tiernos,  ajo  espachurra- 
do, perejil,  cebolla,  limón  on  rodajas  sin  cascara. ni  pepita, 
pimienta  en  grano,  dos  cucharadas  de  aceite,  y  un  pedazo 
de  mantequilla  del  grandor  de  un  huevo;  póngase  el  baca- 
lao encima,  cúbrase  con  una  capa  de  igual  mezcla  y  rocíese 


245 

con  pan  rallado;  póngase  la  cazuela  sobre  fuego  lento  para 
que  hierva  poco  á  poco;  añádase  asumo  de  limón,  un  poco 
de  pimienta,  y  hágasele  tomar  color  en  el  horno. 

805.  Bacalao  comnn. — Se  rebana  mucha  cebolla,  se  pica 
perejil,  se  pelan  muchos  ajos  y  se  fríe  todo  en  aceite;  se 
asan  uoa  jitomates  y  se  deshacen  con  la  mano,  se  frien  en 
la  cebolla,  se  echa  el  bacalao  con  un  poco  de  agua,  y  al 
apearlo  de  la  lumbre,  una  buena  cantidad  de  aceite;  luego 
alcaparras,  aceitunas  y  chiles. 

806.  Otro. — Se  frien  en  aceite  y  manteca  unos  ajos  moli- 
dos; ya  fritos  se  les  agrega  aceite  de  escabeche  y  luego  el 
bacalao  pasado  antes  en  agua  caliente;  se  le  deja  hervir  un 
poco  y  antes  de  apearlo,  se  le  agrega  vino  y  aceite. 

807.  Bacalao. — En  muy  poca  manteca  y  bastante  aceite 
se  fríe  un  pedazo  de  pan  y  un  ajo  chiquito;  se  saca  y  en  el 
mismo  aceite  se  fríe  después  bastante  cebolla,  que  se  deja 
refreír  hasta  que  se  acitrona;  entonces  se  le  echa  una  cu- 
charada de  vinagre  de  Castilla,  se  deja  secar  el  vinagre  y  se 
le  pone  un  chile  ancho  que  ha  de  estar  remojado  desde  la 
víspera,  se  refríe  el  guiso  y  se  sazona  con  el  mismo  caldo  en 
que  se  coció  el  bacalao.  Luego  que  ha  dado  un  hervor  so 
le  echa  el  pedazo  de  pan  y  el  ajo  que  se  frió  al  príncicio 
después  de  haberlo  molido.  Cuando  está  á  medio  freír  pón- 
gasele un  poco  de  perejil  picado. 

808.  Bacalao.  — Se  desala  muy  bien  el  bacalao,  se  echa  en 
una  cazuela  llena  de  agua  y  se  pone  á  la  lumbre  hasta  que 
se  calienta,  pero  antes  de  que  hierva  se  apea  de  la  lnmbre 
para  que  no  se  desbarate  el  bacalao  Se  saca  este  del  agua 
y  se  despelleja  y  quitan  las  espinas.  Se  pelan  unos  ajos,  se 
machacan  con  aceite  y  manteca  y  se  muelen;  se  remoja  un 


246 

pedazo  de  pan  y  te  muele.  Se  echa  aceite  y  manteca  en  una 
cazuela,  ae  le  echa  el  ajo  y  pan,  y  ae  agrega  pimienta  en 
polvo,  pan  en  polro  también  y  tomillo  con  un  poco  mas  de 
aceite;  después  se  echa  en  todo  esto  el  bacalao  sin  agua.  Se 
adorna  con  aceitunas  y  alcaparras. 

809.  Otro. — Se  prepara  como  el  anterior.  Se  echa  una 
capa  de  caldo  de  escabeche  de  Veracruz,  una  de  yerbas  y 
otra  de  bacalao  hasta  que  se  cubra  la  tortera;  la  última  ca- 
pa debe  ser  de  caldo.  Se  pone  á  dos  fuegos  lentos  hasta  que 


810.  Bacalao  á  la  vvscaina. — Desques  de  mojado  y  hecho 
trozos,  se  hace  que  de*  un  hervor  mientras  se  asan  en  parri- 
lla unos  cuantos  jitomates,  se  les  quita  el  pellejo,  y  con  cu- 
chara de  madera  se  deshacen  bien  en  un  plato;  se  pica  mu- 
cha cebolla  menuda,  y  se  pone  en  aceite  á  rehogar  y  cuando 
este*  aun  sin  tomar  jcolor  se  aftade  el  jitomate  y  se  concluye 
de  rehogar.  Puesto  el  bacalao  en  una  cazuela  con  método, 
se  echa  encima  el  jitomate,  cebolla  y  aceite  en  que  se  frió* 
y  se  deja  á  fuego  lento  hasta  que  el  bacalao  este*  bien  coci- 
do. Es  preciso  tener  cuidado  de  menear  á  menudo  la  ca- 
zuela para  que  el  bacalao  tome  la  salsa  y  siempre  conviene 
hacerlo  á  fuego  lento. 

811.  Otro  modo. — Se  parte  en  trozos  pequeños  y  se  pone 
en  una  cazuela  con  una  capa  de  cebollas  cortadas  en  rajas 
delgadas  y  redondas,  jitomates  y  chiles  del  tiempo  picados; 
encima  de  esta  capa  se  pone  otra  de  bacalao  bien  arreglado, 
y  así  sucesivamente  hasta  lo  que  haya  menester,  concluyen- 
do con  la  capa  de  jitomate,  chile,  etc.  Se  echa  después  por 
encima  bastante  aceite,  y  se  pone  con  fuego  lento  por  arri- 


247 

ba  y  abajo,  dejándolo  cocer  bien  hasta  que  esté  a  punto  de 
servirse. 

812.  Bacalao  con  papas. — Se  tiene  á  remojo,  y  después  so 
corta  en  pedazos  y  fríe  en  aceite;  cuando  está  bien  dorado  se 
echa  agua  y  unas  papas,  7  que  cueza  todo;  después  se  ma- 
chacan ajos  fritos,  perejil,  pimienta  y  una  miga  de  pan  pa- 
ra espesar  el  caldo,  sirviéndose  al  cabo  de  un  rata 

813.  Bacalao  con  papas,  de  otro  modo. — Se  fríe  el  bacalao, 
y  después  se  rehoga  con  papas,  se  echa  agua,  un  poco  de  pe- 
rejil y  vinagre. 

814.  Bacalao  en  blanco. — Se  cuece  después  de  bien  lim- 
pio, y  cuando  va  á  hervir  se  espuma  y  se  quita  de  la  lum- 
bre, se  tapa  bien,  dejándolo  un  cuarto  de  hora,  que  enton- 
ces se  saca  del  agua  y  se  escurre;  póngase  en  seguida  en  una 
cazuela  un  poco  de  manteca,  nuez  moscada,  harina  y  pimien- 
ta; se  deslíe  todo  en  un  poco  de  leche,  se  echa  después  el 
bacalao  para  que  tome  el  gusto  de  este  guiso  y  se  sirve. 

815.  Bacalao  en  cazuela. — Córtese  el  bacalao  en  trozos, 
poniéndolo  en  una  cazuela  de  modo  que  cubra  el  fondo; 
póngase  después  sobre  él  una  espesa  capa  de  pan  rallado, 
ajos  y  perejil,  encima  otra  capa  de  bacalao,  y  así  sucesiva- 
mente hasta  que  se  llene  la  cazuela;  después  se  echa  por  en- 
cima aceite  crudo,  ajo,  chile  y  agua  que  cubra  todo,  tápese 
la  cazuela  y  déjese  cocer  á  fuego  lento,  hasta  que  quede  ca- 
si enjuto,  sirviéndolo  en  la  misma  cazuela. 

816.  Bacalao  con  cebollas. — Después  de  haber  estado  en 
remojo,  se  cortan  trozos  y  se  secan  con  un  trapo  limpio;  en 
una  cazuela  se  pone  una  buena  capa  de  cebollas  cortadas  en 
ruedas  gruesas,  jitomate,  unos  dientes  de  ajo  y  un  poco  de 
pimienta  y  canela;  sobre  ellas  se  pone  otra  capa  de  trozos 


248 

de  bacalao,  encima  otra  de  cebolla,  jitomate  y  ajo,  y  así  ae 
continúa  hasta  que  se  llene  la  cazuela;  échese  aceite  en  abun* 
d&ncia,  un  poco  de  clavo  y  chile  verde  y  se  pone  á  fuego 
manso,  sin  echar  caldo  hasta  que  se  haya  consumido  el  jugo 
del  jitomate  y  de  la  cebolla. 

817.  Bacalao  rebozado  y  guitado. — Después  de  cocido  el 
bacalao,  se  corta  en  trozos  pequeños,  se  rebozan  en  harina 
y  se  fríen  en  una  cazuela;  sobre  ellos  se  echa  perejil  y  agua 
hasta  que  se  cubran,  un  poco  de  cebolla  frita,  especias  y  zu- 
mo de  limón;  cuezase  así  hasta  que  se  consuma  la  salsa. 

818.  Bacalao  guitado  de  otro  modo. — Preparados  los  trozos 
de  bacalao,  piqúese  cebolla  y  se  fríe,  macháquense  ajos,  pi- 
mienta y  azafrán,  mézclese  todo  con  la  cebolla,  y  rocíese 
por  encima  el  bacalao  al  tiempo  de  servirlo. 

819.  Bacalao  á  edito  dé  Francia, — Después  de  cocido  el 
bacalao,  tómese  la  tortera  en  que  haya  de  servirse,  que  de- 
berá ser  un  poco  honda;  póngase  en  ella  un  poco  de  ajo  ma- 
jado, cebolla,  perejil,  ruedas  de  limón  sin  cascara  ni  pepita, 
pimienta  en  grano,  dos  cucharadas  de  aceite,  y  un  pedazo 
de  mantequilla  mejor  que  manteca,  del  tamaño  de  un  hue- 
vo, póngase  el  bacalao  por  encima,  cúbrase  con  una  capa  de 
igual  mezcla  y  rocíese  con  pan  rallado;  después  póngase  la 
cazuela  á  fuego  lento  para  que  hierva  poco  á  poco;  añádase 
un  poco  de  zumo  de  limón  y  pimienta  por  encima. 

820.  Bacalao  rebotado, — Después  de  cocido  se  humedece 
en  huevo;  envuélvase  en  ralladuras  de  pan,  y  fríase enacei- 
te, y  al  tiempo  de  servirlo  se  le  echa  por  encima  un  polvQ 
de  azúcar. 

821.  Bacalao  d  estüo  de  arriero.  -Cocido  y  enjuto  se  po- 
ne en  platos;  fríase  aceite  y  un  ajo  y  échese  después  chile 


249 

vorde  6  picante;  y  la  misma  cantidad  de  vinagre  que  dé  acei* 
te,  y  esta  salsa  se  echa  por  encima  del  bacalao  al  tiempo  de 
servirlo. 

822.  Bacalao  á  Jo  marinero. — Cocido  el  bacalao,  se  pone 
en  el  platón  con  nn  poco  de  su  propio  caldo,  en  el  cual  se 
disuelve  una  yema  de  huevo  cocido,  un  ajo  machacado  y  un 
poco  de  pimienta;  échese  aceite  crudo,  vinagre  y  oebollitas 
cocidas  con  el  mismo  bacalao. 

823.  Bacalao  con  leche. — Se  echa  el  bacalao  en  una  cazue- 
la con  agua  y  se  tapa  la  cázuola;  ya  que  está  cocido  se  parte 
en  rebanadas  chiquitas;  se  miden  para  cada  media  libra  de 
bacalao  dos  tazas  de  leche,  media  taza  de  aceite  y  una  bola 
de  mantequilla  del  tamaño  de  un  huevo  de  paloma;  se  pone 
á  quemar  la  mantequilla  y  ya  que  está  se  le  echa  el  bacalao 
á  que  se  sancoche  sin  freirse,  y  se  le  va  echando  poco  á  po- 
co leche  y  unas  gotas  de  aceite  y  se  menea  hasta  que  espesa, 
y  se  le  vuelve  á  echar  leche  y  aceite  hasta  terminar,  procu- 
rando que  quede  espeso  como  postre.  Se  sazona  y  se  ador- 
na con  yemas  de  huevo;  queda  muy  bueno. 

824.  Bacalao  con  almendras  y  piñones. — Después  de  bien 
cocido  y  frío  se  seca  con  un  trapo,  se  fríe  con  un  poco  de  ha- 
rina en  manteca.  Para  hacer  el  caldillo  se  pica  un  poco  de 
ajo,  cebolla  y  perejil,  todo  muy  menudo  y  se  fríe  en  aceite 
á  que  no  se  dore,  sino  que  se  cueza.  Se  le  echan  almendras 
y  piñones  molidos  unos  y  otras  aparte,  y  después  'se  incor- 
poran con  el  aceite,  pero  no  se  deja  refrier  mucho.  Éche- 
sele un  poco  de  agua  para  que  sazone  con  la  debida,  y  pón- 
gase luego  el  bacalao  que  se  deja  á  dos  fuegos  mansos  hasta 
que  se  consuma  el  agua.  Para  cada  libra  de  bacalao  se  re- 
quieren dos  onzas  de  almendra  y  poco  mas  de  piñones. 


260 

825.  Bacalao  con  coliflor. — Se  ponen  á  hervir  loe  trozos  de 
bacalao;  se  fríe  en  aceite  coliflor  picada,  ejotes  y  cebolla 
picada  gorda;  se  saca  esto  después  de  frito  y  en  el  mismo  se 
hace  freir  cebolla  pictída,  perejil  picado  también,  un  chile 
ancho  refregado  y  molido  con  jitomates  asados  y  un  poco  de 
canela;  ya  que  todo  está  frito  se  agregan  pifiones,  almendras 
tostadas  y  pasas,  y  por  fin  el  bacalao;  agregúesele  un  poco 
de  manteca  quemada. 

Se  adorna  con  chiles  y  aceitunas. 

826.  Bacalao  en  albóndiga*. — Piqúese  el  bacalao  después 
de  cocido  y  mézolese  con  miga  de  pan,  sal,  pimienta,  ajos  y 
perejil,  todo  molido,  y  huevos  batidos  en  proporción,  para 
que  tome  una  consistencia  regular,  y  después  de  bien  mes- 
ciado  todo  so  hacen  bolas,  se  envuelven  en  miga  de  pan  y  se 
fríen.  Pueden  guisarse  después  con  caldo  de  pescado,  acei- 
te y  ajo  frito  y  una  corteza  de  pan  machacada  con  •  perejil, 
pimienta  y  un  poco  de  azafrán,  y  se  echa  sobre  las  albondi- 
guillas. 

827.  Aguja»  de  bacalao  frita*. — De  un  huen  bacalao  desa- 
lado y  limpio  se  cortan  unas  lonjas  6  tiras  del  largo  de  un 
dedo,  pero  sin  quitarle  la  piel;  cuando  se  tengan  todas,  se 
ponen  en  adobo  en  una  cazuela,  con  pimienta,  nuez  mosca- 
da, cebollas  en  rebanadas,  perejil  en  rama,  aceite  y  vinagre, 
laurel  y  estragón,  revolviéndolo  de  cuando  en  cuando;  al 
momento  de  servir  este  bacalao,  se  enjuga,  se  pasa  por  ha- 
rina, y  luego  por  huevo  batido  y  pan  rallado,  f riéndolo  bien 
en  buen  aceite,  y  colocándolo  después  de  escurrido  sobre  el 
plato  con  guarnición  de  perejil  frito. 

828.  Bacalao  al  estilo  &UCo*U&  Sotavento.— Se  deml* 
y  se  echa  en  una  cazuela  con  agua  que  le  cubra;  se  pone  á 


251 

la  lumbre  á  que  se  caliente  ol  agua;  se  saca  y  'se  le  quitan 
los  pellejos  y  espinas.  Córtese  en  lonjas  á  lo  largo.  Se  pi- 
ca muy  menudo  bastante  ajo  y  perejil.  Échese  en  una  sar- 
tén bastante  aceite  y  manteca  y  allí  se  medio  fríe  el  ajo  y 
perejil,  meneándolo  para  que  no  se  tueste,  y  se  le  va  polvo- 
reando con  pimienta  muy  molida.  Póngase  el  bacalao  en 
otra  cazuela  y  báñese  con  el  caldo  de  aceite  y  manteca;  pón- 
gase encima  otra  capa  de  bacalao  y  báñese  asta  otra  Tez  con 
el  caldo  y  así  sucesivamente,  siendo  lo  último  el  caldo,  al 
cual  se  agrega  aceite  crudo;  se  tapa  la  cazuela  y  se  pone  á 
dos  fuegos  muy  mansos,  á  que  cueza  lentamente.  Se  reco- 
mienda especialmente  este  guiso. 

829.  Albóndigas  de  bacalao  frita*. — Cocido  el  bacalao  se 
le  quitan  las  espinas.  Se  muele  y  revuelve  con  pan  rallado, 
ajos  picados,  perejil,  pimienta,  clavo  molido,  huevos  bati- 
dos y  sal.  Estando  sazonada  la  masa  se  hacen  las  albóndi- 
gas con  una  cuchara  que  se  ha  de  mojar  en  vinagre  para 
que  la  masa  no  se  pegue,  y  se  fríen  en  aceite  muy  caliente. 
Se  hace  luego  un  caldillo  con  pan  frito  molido,  yemas  de 
huevo,  especias  molidas,  pimienta,  perejil  picado  y  cebolla 
picada  y  frita.  Cuando  está  de  sazón  el  caldillo,  se  le  echan 
las  albóndigas  dejándolas  hervir  un  poco  para  que  cuezan 
bien. 

890.  Bacalao  con  papas  d  lo  canario. — Se  limpia  y  desala; 
friese  en  aceite  hasta  que  se  dora  por  ambos  lados;  se  saca, 
y  en  el  mismo  aceite  se  fríen  las  papas  peladas  y  partidas  y 
ocho  dientes  de  ajo;  sofritos  éstos,  se  quitan  de  la  freide- 
ra; echase  el  bacalao  con  las  papas  y  un  jarro  de  agua,  ha- 
ciéndole que  hierva.  Cuando  está  todo  cocido,  se  macha- 
can los  ajos  fritos,  un  poco  de  perejil,  pimienta,  unas  he- 


252 

brM  de  azafrán  y  una  miga  de  pan  remojada;  deslíese  todo 
eato  con  el  caldo  del  bacalao,  y  ae  echa  en  el  guiso;  sazóne- 
se, y  al  dar  un  hervor  te  separa  y  sirve. 

831.  Bacalao  d  lo  limeño. — Deapuea  de  preparado  y  deea- 
lado,  tómense  unos  jitomates  grandee,  pártanse  por  enme- 
dio,  y  ásense  en  unas  parrillas;  quíteseles  el  pellejo,  y  ae 
ponen  en  un  plato  para  que  suelten  todo  el  sumo;  se  pican 
muyen  pequeño  cebollas,  ajos  y  un  poco  de  perejil;  pón- 
gase á  sofreír  esto  último  en  aceite,  y  cuando  haya  trascu- 
rrido un  pequeño  rato  se  echan  los  jitomates  y  se  fríe  todo 
bien;  póngase  el  bacalao  en  una  camela,  y  óchese  por  enci- 
ma esta  fritura,  unas  especias  y  un  poco  de  sal,  se  le  hace 
hervir  un  rato  para  que  tome  la  salsa,  y  cocido  que  esto,  se 
sirve. 

832.  Bacalao  á  la  veracnaana, — Se  corta  el  bacalao  en 
pedazos  regulares,  se  echa  en  una  cazuela  oon  agua,  en  la 
que  ae  tendrá  unas  ocho  horas;  cuando  haya  soltado  la  sala- 
zón, se  pone  en  un  platón;  se  le  deja  escurrir  bien  el  agua, 
quftansele  las  espinas,  y  en  una  freidera  se  coloca  bien  ex- 
tendido; óchense  ajos  mondados  partidos  porenmedio,  pan 
rallado,  un  poco  de  chile  ancho  molido  y  perejil  picado;  co- 
loqúese sobre  esto  otra  capa  de  bacalao  también  extendido; 
óchense  cuatro  onzas  de  aceite,  agua  y  sal  hasta  que  lo  cu- 
bra; póngase  á  la  lumbre  bien  tapado  y  á  poco  fuego;  cuan- 
do no  le  quede  caldo  alguno  puede  servirse. 

833.  Bacalao  á  lo  camagiU$ano.  — Después  de  preparado 
como  ae  ha  dicho,  se  seca  y  pónese  á  cocer;  cuando  lo  eató, 
ae  escurre  bien  y  se  pone  en  una  cazuela.  Muélanse  seis 
granos  de  pimienta,  un  poco  de  perejil,  seis  ajos,  ocho  ave- 
llanas tostadas,  pan  rallado,  un  poco  de  vinagre,  núes  moa- 


253 

cada  rallada,  y  con  una  taza  de  agua  fría  ae  deslíe  todo; 
échese  en  la  cazuela  del  bacalao,  añadiendo  aceite  frito  con 
unos  ajos,  unas  gotas  de  zumo  de  limón,  la  sal  necesaria, 
poniéndola  al  fuego  para  que  cueza  un  poco;  y  puedo  ser* 
vine. 

834.  Bacalao  de  Cfefít.— Se  remoja  el  bacalao  desde  la 
Tíspera  y  al  otro  dia  bien  temprano,  se  cuece,  y  ya  que  es- 
tá bien  blando  se  aparta,  se  le  sacan  las  espinas  y  el  pellejo 
y  se  divide  en  lonjitas  chicas  para  echarlo  en  la  salsa  si- 
guiente: Se  ponen  iguales  cantidades  de  aceite  y  manteca 
y  allí  se  fríen  unos  dientes  de  ajo  enteros;  éstos  se  sacan 
y  se  echan  á  freír  otros  pelados  y  picados  con  bastantita  ce* 
bolla  en  gajos,  tajadas  de  chile  y  jitomate  muy  picad  i  to,  y 
entre  tanto  se  muelen  los  ajos  que  se  frieron  con  una  por- 
ción de  jitomates  cocidos,  lo  que  se  agrega  también  al  re- 
frito y  ya  que  está  éste  se  echa  un  poco  de  perejil  picado, 
un  pedacito  de  pan  remojado  y  molido  y  se  agrega  el  ba- 
calao á  que  hirva  á  fuego  manso,  y  á  la  hora  de  servirse  se 
fríen  unas  rebanadas  de  pan  y  se  le  colocan  encima  y  se 
sirve  en  la  misma  sartén  con  unos  chiles  encurtidos. 

835.  Bobo  empapelado. — Bien  desalado  el  bobo  y  limpio 
se  muelen  todas  especias  y  se  embarra  con  ellas  el  bobo  por 
dentro  y  por  fuera,  y  después  con  manteca.  Se  unta  un  pa- 
pel con  aceite,  se  esprimen  sobre  él  cinco* Ümones  y  se  en- 
vuelve el  pescado  que  se  coloca  en  una  tortera.  Ta  en  la 
lumbre,  póngasele  vino  caflon,  vinagre  y  agua  y  téngase  á 
dos  fuegos  dando  vueltas  al  pescado.  Ya  que  se  consumió 
el  caldillo,  échese  á  la  tortera  mucho  aceite  para  que  se  fría 
el  bobo. 

836.  Bobo  guisado.—  Se  pone  á  remojar  para  que  se  desa- 


264 

le  bien,  y  se  le  quiten  las  eemmas.  Se  parten  en  racione*, 
se  ponen  á  la  lumbre  en  una  casuela  con  agua,  y  no  ae  ene* 
cen  todas  á  un  tiempo,  sino  unas  tras  otras;  la  cabes»  debe 
ser  la  última.  Póngase  en  un  platón.  Se  pone  á  hervir  en 
una  sartén  aceite  y  manteca;  se  le  echa  una  cucharada  de 
pimienta  á  que  se  fría  un  poco  y  se  meada  con  la  manteca 
en  que  se  frió  el  baba  Con  esta  salsa  se  rocía  el  pescado, 
agregándole  por  encima  un  poco  de  vinagre.  Debe  hacerse 
este  guiso  tres  6  cuatro  horas  antes  de  comer. 

887.  Bobo  frito.-" Se  pica  jitomate  y  cebolla  y  se  echa  en 
una  casuela  con  aceite  y  manteca  á  que  se  fría.  Ta  casi  fri- 
to se  le  agregan  aceitunas  partidas  y  cominos  á  que  acabe 
de  freír  todo.  Entonces  se  le  echa  el  bobo,  que  se  polvorea 
con.  pan  rallado  y  molido.  Dijese  freír  bien  el  bobo,  y  al 
llevarse  á  la  mesa  agregúesele  aceite,  aceitunas  y  alcaparras. 

838.  Bobo*  reüenos  y  atado*. — Limpios  y  enjugados,  se 
rellenan  de  huevos,  alcaparras  y  aceitunas,  y  si  es  tiempo 
en  que  se  puede  se  aumenta  el  picadillo  con  jamón  y  chori- 
zos picados.  Se  untan  unos  papeles  con  aceite  y  se  rocían 
con  sal  y  pimienta,  y  en  ellos  se  envuelven  los  bobos,  que 
se  ponen  á  cocer  en  una  parrilla  y  se  les  da  vueltas  para  que 
se  doren  por  igual. 

Pueden  suprimirse  los  chorizos  y  el  jamón,  haciendo  lo 
mismo  que  se  dijo. 

839.  Bobo  con  modosa* — Después  de  limpio  se  cuece. 
Muélase  mostaza  lavándola  de  modo  que  no  quede  picante; 
se  le  revuelve  pan  frito  molido,  vinagre,  clavo,  pimienta  y 
nuez  moscada  y  se  roda  el  bobo  con  esta  salsa  al  ir  á  ser- 
virle. 

840.  Otro  de  bobo. — Se  pica  bastante  cebolla,  ajos  y  pe- 


255 

tejí]  y  te  muele  después  todo  junto;  póngase  á  freír  en  acei- 
te y  manteca,  añádase  agua  y  sal,  óchese  el  bobo  entero  6 
partido  en  raciones!  y  déjese  cocer  en  esta  salsa.  Friese  en 
la  sartén  y  en  manteca  un  poco  de  harina  á  que  tome  color 
de  trigo,  y  cuando  ya  está  se  echa  caliente  sobre  el  pesca- 
do meneando  el  caldillo  para  que  no  se  forme  masa.  Agre- 
gúese á  la  salsa  clavo,  canela,  cominos  y  pimienta  todo  mo- 
lido; añádase  aceite  y  vinagre  y  déjese  sazonar  otro  poco 
hasta  que  el  caldo  quede  de  un  espeso  regular.  Poco  tiem- 
po antes  de  estar  de  sazón  se  le  echa  un  polvo  de  orégano. 
Se  adorna  con  aceitunas,  alcaparras  y  chiles. 

841.  Otro  bobo /ruco, — Se  pone  á  hervir  con  sal;  ya  que 
está  á  medio  cocer  se  apea  de  la  lumbre.  Se  parte  bastante 
jitomate  que  esté  muy  colorado,  se  hace  freir  en  aceite  y 
manteca,  se  le  añade  pimienta  y  clavo,  se  le  exprime  medio 
limón,  se  le  echa  sal  y  el  agua  misma  en  que  coció  y  se  po- 
ne en  la  lumbre  hasta  que  está  cocido,  debiendo  quedar  la 

842.  Bobo  en  aceite  y  vinagra — Se  remoja  el  bobo  y  se 
le  quitan  las  escamas.  Se  pone  en  la  lumbre  una  cazuela  con 
agua  y  cuando  está  muy  caliente  se  le  echa  el  pescado  á  que 
se  medio  cueza.  Se  saca  del  agua  y  se  enjuga  con  una  ser- 
villeta, se  coloca  en  un  platón  y  se  baña  con  un  caldillo  he- 
cho con  aceite,  vinagre,  mucho  perejil  picado  y  cebolla  pi- 
cada también  muy  menuda.  Se  adorna  con  aguacate  y  chi- 
les en  vinagre. 

843.  Otro  de  bobo. — Piqúese  perejil  con  bastantes  ajos. 
Muélase  clavo,  canela  y  pimienta  en  seco,  orégano,  mejora- 
na y  laurel  Limpio  el  bobo,  enjugúese  con  una  servilleta, 
empápese  de  vinagre  de  Castilla  y  rellénese  con  el  recaudo. 


&56 

Embárrete  después  de  aceita,  tíntese  un  papel  de  manteca, 
envuélvanse  con  el  loe  bobos,  que  se  amarran  con  un  hilo  y 
se  ponen  á  cocer  en  una  tortera  á  dos  fuegos.  Se  hace  una 
salsita  con  perejil  muy  picado,  cebolla,  aceite,  vinagre,  al* 
caparras,  sal  y  pimienta,  y  báñese  el  bobo  al  ponerlo  en  el 
platón  para  llorarlo  á  la  mesa.  Adórnele  con  aceitunas  y 
alcaparras. 

844.  Bobo*  en  caldo.— -Se  pica  cebolla,  ajo,  perejil  y  oré- 
gano, todo  muy  menudtto,  se  fríe  en  manteca,  y  ya  frito  se 
le  echa  agua  de  modo  que  quede  ralito.  Se  muele  un  pullo 
de  alcaparras,  una  rebanada  de  pan  dorado  en  manteca,  mo- 
lido con  clavo,  pimienta  y  cominos.  En  el  caldillo  se  ponen 
los  bobos  á  hervir  y  se  pasan  á  un  platón. 

845.  Otro  de  bobo. —Ya  que  está  el  bobo  escamado  se  po- 
ne en  una  tortera  con  poca  agua,  unas  rebanadas  de  limón, 
aceite  y  vinagre  y  se  deja  que  dé*  un  hervor;  al  penerlos  en 
el  platón  se  bañan  con  su  propio  caldillo  y  aceite  y  se  pol- 
vorean con  erégano,  cebollas  cocidas,  aceitunas,  alcaparras 
y  chiles. 

840.  Caldillo  para  bobos  cocidos. — Piqúese  cebolla,  pere- 
jil, ajo  y  orégano;  muélase  y  fríase  con  unas  yemas  de  hue- 
vo y  rebanadas  de  pan  frito  y  molido,  clavo,  pimienta  y  co- 
minos; Agregúese  caldo  del  mismo  en  que  coció  el  bobo  y 
mézclese.  Adórnese  con  aceitunas  y  un  chile  molidos,  y  bá- 
ñese con  esta  salsa  el  bobo  cocido. 

847.  Qui*+do  de  bobo. — Después  de  escamados  y  limpios 
se  refriegan  los  bobos  enteros  con  limón  y  sal  para  que  des- 
flemen. Piqúese  bastante  cebolla,  jitomate  asado  molido  y 
perejil;  frianse  con  bastante  aceite;  ya  que  esté  échese  en  el 
caldillo  el  bobo,  añadiéndole  clavo,  pimienta  y  azafrán  to- 


257 

do  molido,  aceitunas  alcaparras  y  un  poco  de  vinagre.     Se 
pone  á  dos  fuegos  mansos. 

848.  Bobo»  en  estofado  á  la  tierra  caliente. — Bien  lavados 
se  rebanan  á  lo  ancho  sin  partirlos,  se  rellenan  las  rajadas 
con  clavo,  culantro,  pimienta  y  cominos,  todo  molido;  se 
envuelven  con  hojas  de  aguacate  y  se  lían.  Se  pone  en  la 
lumbre  una  olla  con  pepextle  como  para  tamales  y  se  meten 
en  ella  los  bobos,  añadiendo  vino,  agua  y  vinagre  en  partes 
iguales.  Se  tapa  la  olla  con  un  plato  y  se  amarra  en  la  boca 
de  la  olla  una  servilleta.  Ya  que  están  los  bobos  cocidos  se' 
ponen  en  un  platón  y  se  rocían  con  su  propio  caldo,  agregán- 
dole aceite.     Se  adorna  con  aceitunas,  alcaparras  y  chiles. 

849.  Robalo  con  vino  Jerez. — Se  fríen  dientes  de  ajo,  se- 
gún la  cantidad  de  pescado;  se  saca  y  se  echan  dos  tantos 
de  vinagre  y  uno  de  vino.  Se  muele  pimienta,  clavo,  lau- 
rel, orégano  y  cominos.  Se  echa  todo  esto  con  el  pescado 
para  que  se  cueza;  se  adorna  con  chiles  y  aceitunas. 

850.  Otro  con  cebolla. — Se  pica  cebolla  y  ajo  menudito  y 
junto  con  ellos  se  frie  clavo  y  pimienta.  Aparte  se  fríe  un 
poco  de  pan  blanco  y  se  remoja  en  vinagre,  se  muele  y  se 
junta  con  lo  que  se  está  f rienda  El  pescado  debe  estar  co- 
cido desde  antes,  se  parte  en  pedazos  y  se  echa  en  lo  dicho. 
Se  deja  sazonar  y  se  adorna  con  chiles,  alcaparras,  etc. 

a  851.  Otro  robalo  de  rueda. — Después  de  lavado  y  desala- 
do se  corta  en  raciones  y  se  envuelven  en  harina;  se  fríen 
en  aceite  y  manteca.  Se  rebanan  seis  manojos  de  cebollas, 
se  echa  manteca  y  aceite  en  otro  trasto  y  allí  se  echa  la  ce- 
bolla meneándola  con  viohncia.  Se  agrega  media  botella 
de  vinagre  á  que  haga  caldo;  añádase  un  poco  de  pimienta 
y  tomillo,  se  baja  de  la  lumbre,  y  se  va  poniendo  ol  pesca- 

¿A  COCINERA  POBLANA. — TOM.—  I.  17. 


368 

do  en  una  tortera  y  se  cabré  con  esto  salsa.  8e  adorna  con 
aceitunas  alcaparras  y  aceite. 

Puede  guisarse  de  la  misma  manera,  bagre,  lisa,  y  moja* 
rras.     Sale  muy  bueno. 

862.  Robalo  dé  rueda  ófreteaL — Desalado  y  limpio  se  en- 
juga y  cortan  radones  que  se  fríen  en  aceite  y  mantees. 
Ta  que  todo  está  frito  se  desvenan  deepues  de  remojado» 
en  agua  de  ceniza,  tres  chiles-  anchoa  mulatos.  Be  muele 
una  cabeaa  de  ajo  y  unos  cominos;  en  el  mismo  trasto  en 
que  se  frió  el  pascado  se  echa  un  poco  de  agua  á  que  forme 
un  caldillo  espeso,  al  cual  se  agregan  cebollas  cocidas  y  par- 
tidas en  gajos,  un  poco  de  vinagre,  alcaparras,  aceitunas, 
chiles  en  vinagre,  orégano  y  bastante  aceite.  Junto  todo 
cato  échese  el  pescado  en  el  caldillo,  en  que  ha  de  hervir 
muy  poco.    Se  adorna  el  platón  con  aceitunas. 

868.  Otro  robalo. — Se  desvena  un  poco  de  chile  mulato  y 
se  tuesta  en  poca  lumbre,  procurando  que  no  se  queme* 
Muélanse  cinco  grano»  de  pimienta;  rebánese  una  pequeña 
cantidad  de  cebolla  muy  menuda;  quítese  la  sal  al  robalo  y 
hágase  tajadas  que  se  enjugan  con  un  cotense.  Frfanse  des- 
pués en  aceite  y  manteca,  añaniéndole  un  polvo  de  harina» 
Se  embarra  de  manteca  una  tortera  y  se  polvorea  con  chile; 
se  pone  una  capa  de  pescado  y  se  eubre  con  la  cebolla  rebo- 
ñada; agregúese  un  poco  de  tomillo,  unas  hojas  de  laurel  y 
encima  otro  polvo  de  chile.  Póngase  otra  capa  de  pescado 
y  vayase  repitiendo  la  operación  anterior  hasta  concluir, 
advirtiendo  que  deben  ponerse  también  aceitunas  picadas  y 
alcaparras.  Se  le  echa  por  encima  aceite  y  vinagre,  se  po- 
ne á  dos  fuegos  lentos  y  no  se  menea  con  cuchara  sino  sa- 
cudiendo la  tortera» 


259 

854.  Robalo  con  jitomate. — Se  desala  el  robalo  y  después 
de  secarlo  con  una  servilleta  se  fríe  en  manteca  y  aceite. 
Se  pica  bastante  jitomate  sin  pepita,  tres  manojos  de  cebo- 
lla y  una  cabeza  de  ajo,  todo  muy  menudo,  bastante  pere- 
jil, picando  cada  cosa  separadamente.  Se  echa  aceite  y 
manteca  en  una  cazuela.  Se  sancocha  antea  que  todo  el  ajo, 
luego  la  cebolla  y  después  el  jitomate  con  el  perejil;  f ríase 
mucho  esto  último.  Se  le  echa  un  poco  de  tomillo,  se  mue- 
le clavo,  pimienta,  canela  y  azafrán;  se  deja  hervir  un  poco 
de  agua  y  vinagre  hasta  que  espese,  se  agregan  unas  alca- 
parras y  se  echa  el  pescado  para  que  hierva  á  fuego  manso. 
Póngase  bastante  aceite  y  para  llevarlo  á  la  mesa  se  adema 
con  chiles,  alcaparras  y  aceitunas. 

Se  tiene  por  experiencia  que  este  guiso  puede  aplicarse  á 
cualquier  pescado. 

865.  Robalo  dt  rueda. — Se  desala  bien  el  robalo,  se  parte 
en  raciones,  se  enjuga  con  un  eotense,  se  fríe  en  manteca  y 
aceite;  se  rebana  una  buena  cantidad  de  cebolla  y  se  fríe  en 
el  mismo  aceite  en  que  se  frió  el  pescado,  advirtiendo  que 
la  cebolla  no  ha  de  quedar  dorada  sino  cocida.  Échesele 
mas  aceite,  un  poco  de  vinagre,  un  polvo  de  pimienta  y  un 
poquito  de  tomillo.  Se  pone  el  pescado  á  que  dé  un  peque- 
ño hervor,  se  echa  en  platón  y  se  adorna  con  perejil  fres- 
co, chiles  en  vinagre,  y  alcaparras. 

Lo  mismo  puede  hacerse  con  la  diferencia  de  agregarle 
manteca  en  vez  de  aceite  y  repitiendo  en  ambos  casos  las 
mismas  operaciones. 

856.  Bagre  con  aceitunas. — Se  pican  aceitunas  y  unos 
dientes  de  ajo  y  se  fríen  en  aceite  y  manteca  con  unas  alca- 
parras y  pan  tostado  y  molido;  se  muele  clavo  canela  y  pi- 


200 

miento  7  se  fríe  oon  jitomate  picado.  Sazónete  y  échete  el 
pescado,  que  ha  de  estar  frito  desde  antea.  Adórnete  con 
aceitunas  7  chiles. 

857.  Bagre  adobado. — Quitado  el  pellejo  al  bagre  se  fríe 
este  en  aceite  7  se  saca  de  la  cazuela;  en  el  mismo  aceite  se 
fríen  chiles  anchos  remojados  molidos  con  almendras,  7  asi 
que  eptó  7  no  quede  mu7  ospeso  se  echarán  las  raciones  del 
bagre,  se  cubrirán  con  el  adobo  agregando  aceite  7  se  pone 
á  dos  fuegos.  Cuando  haTa  consumido  se  saca  con  cuidado 
7  se  ponen  en  el  platón  cubriéndolas  con  su  adobo.  Se  ador- 
na oon  rabanitos  picados,  cebolla  rebanada,  aceitunas  7  tor- 
nachiles partidos. 

868.  Bagre  en  ajo  comino. — Se  muelen  chiles  anchos  re- 
mojados con  ajos  7  cominos  en  mayor  cantidad,  se  fríen  en 
manteca  con  sal  7  7a  que  esté"  se  le*  agrega  aceite,  vinagre  7 
agua,  7  después  que  ha  berrido  se  echa  el  bagre  7a  dispues- 
to 7  quitado  el  pellejo.  Se  deja  herrir  un  poco  7  ha  de 
quedar  caldoso. 

859.  Bagre. — Limpio  de  escamas  7  tripas  se  rebana  7  fríe 
en  aceite  hasta  que  tome  color.  Se  toman  unas  cabezas  de 
cebolla  7  se  fríen  en  aceite  7  manteca  en  una  cazuela;  7a 
que  tomaron  color  se  les  echa  vinagre,  sal,  laurel,  tomillo, 
ajos  machacados,  nuez  moscada,  clavo  7  pimienta.  Se  pone 
el  bagre  en  esta  salsa  7  se  deja  cocer.  Antes  de  servirle 
se  le  baña  con  aceite. 

860.  Otro. — Se  pone  en  agua  7  ya  remojado  se  raspa  con 
un  cuchillo  para  que  se  le  quite  lo  prieto.     Una  ves  limpio 
se  corta  en  rebanadas  sin  partirlo  7  se  le  exprimen  unos  li- 
mones.   Se  lava  de  nuevo  7  se  seca  bien  con  una  servilleta 
7  luego  se  frie  en  manteca.  Se  asan  unos  jitomates,  se  mon- 


261 

dan  unos  dientes  de  ajo  y  se  muelen  después  con  los  jito- 
mates y  un  poco  de  perejil  fresco;  refríase  todo  junto  con 
dos  6  tres  manojos  de  cebollas  enteras.  Una  vez  que  está 
bien  frito  se  echa  el  agua  agregando  un  polvo  de  clavo  y 
pimienta,  una  buena  cantidad  de  aceite.  Échese  el  pescado 
y  después  alcaparras  y  chiles  en  vinagre.  El  caldo  ha  de 
quedar  espeso. 

861.  Bagre  escabechado. — Se  lava  muy  bien  con  limón,  y 
ya  que  está  limpio  se  enjuga  con  una  servilleta,  se  embarra 
de  harina,  se  fríe  oon  bastante  aceite  y  manteca  y  se  va 
echando  en  una  olla  una  capa  de  pescado  y  encima  una  de 
la  manteca  en  que  so  frió,  encima  de  la  cual  se  echa  clavo 
y  pimienta  molida  y  unas  hojas  de  laurel,  naranjo,  orégano 
y  tomillo.  Se  llena  la  olla  de  vinagre,  que  sea  la  mitad  crio- 
llo y  la  otra  mitad  de  Castilla,  con  aceite.  Se  tapa  la  olla  y 
se  deja  tres  dias,  pasados  los  cuales  se  saca  el  bagre  y  se 
coloca  en  un  platón  para  servirlo. 

862.  Otro  bagre. — Se  fríe  en  harina,  se  pica  jitomate  y 
ajo  y  se  frie  en  aceite  y  manteca;  se  le  echa  clavo,  canela  y 
pimienta;  sazonado  el  caldillo  se  ponen  en  él  las  rebanada? 
de  pescado  y  se  le  agrega  vinagre.  Se  adorna  con  chiles  y 
aceitunas. 

863.  Bagre  en  jitomate. — Se  coje  el  bagre  y  se  echa  en 
una  batea  con  bastante  ceniza  y  poca  agua,  ya  que  ha  pasa- 
do gran  rato  se  refriega  con  escobeta  hasta  que  se  pone 
blando;  se  enjuaga  con  agua  limpia;  se  enjuga  y  se  rebana. 
Se  cuece  y  después  se  le  echa  zumo  de  limón  y  sal;  ya  que 
ha  pasado  bastante  tiempo  se  vuelve  á  enjugar.  Se  revuel- 
ven en  harina  y  se  va  friendo  á  qué  quede  muy  dorado;  asi 
que  está,  se  guarda  para  otro  día;  se  muelen  jitomates  cru- 


262 

dos,  na  poquito  de  culantro,  pimiento  y  claro  poco,  un 
chile  poblano;  iodc  esto  ie  muele  y  te  fríe  y  te  le  echa  una 
poca  de  agua,  ya  que  ha  dado  un  hervor  te  echa  el  pescado 
á  que  vuelva  á  hervir,  y  se  adorna  con  perejil  picado,  ohili- 
toe,  aceituna!,  cebollas  cocidas  y  bastante  aceite  de  comer. 


OSTIONES. 
AnrararoLiS  ananuxts. 

Pocos  alimentos  hay  de  una  digestión  mas  fácil  que  el 
ostión  crudo.  Conviene  á  los  estómagos  mas  débiles,  es  nu- 
tritivo y  apetitivo;  sin  embargo,  debe  tenerse  presente  que 
en  Mtfzioo  hay  un  proverbio  que  dios: 

Mes  con  R  hasta  con  concha, 
Sin  R  levanta  roncha; 

lo  cual  quiere  decir  que  no  pueden  comerse  ostiones,  sin 
peligro  de  que  se  indigesten,  en  los  meses  que  no  traen  R, 
6  sea  mayo,  junio,  julio  y  agosto. 

Lo  mas  común  es  comerlos  crudos  con  un  polvito  de  pi- 
mienta y  zumo  de  limón*  Se  sirven  abiertos  en  un  platón. 
Es  buena  precaución  no  quitarles  la  concha  de  encima  des- 
pués de  abiertos,  porque  así  se  conservan  mas  frescos. 

Antes  de  hacer  uso  de  las  conchas,  es  necesario  reventar 
la  hiél,  que  es  muy  pequeña  y  está  colocada  en  el  fondo  de 
la  concha  y  semejante  al  nácar.  Si  no  se  quitase  de  ante- 
mano, luego  que  se  pusieran  loa  ostiones  en  las  parrillas,  el 


263 

calor  reventaría  la  hiél  haciendo  una  pequeña  explosión  é 
infectaría  el  relleno  qne  se  pone  en  cada  nna  de  ellas. 

864.  Ostiones.  -Muélanse  tomates  sin  pepitas,  cominos, 
ajos  y  un  pedazo  de  pan;  se  pican  cebollas  y  rebanadas  de 
chile  verde;  se  fríe  esto  en  manteca,  ya  que  esté*  se  le  més- 
ela el  recaudo  molido;  se  echan  los  ostiones  cocidos  y  se 
agrega  sal,  vinagre,  aceitunas,  alcaparras,  perejil  y  oréga- 
no; después  que  han  dado  una  vuelta  en  el  recaudo  se  echa 
el  agua  y  se  deja  espesar  un  poco  la  salsa, 

865.  Otro*  ostiones. — Se  pica  de  todo  recaudo  y  se  mué* 
len  de  todas  especias;  se  fríe  todo  en  aceite  y  manteca;  échen- 
se allí  los  ostiones  orudos  sin  agua;  cuando  ya  están  un  po- 
co fritos,  se  les  echa  perejil  muy  picado,  se  unta  una  cazue- 
la con  manteca,  se  colocan  los  ostiones  juntos,  ae  les  echa 
pan  rallado  por  encima  y  se  pone  á  dos  fuegos. 

866.  Otro  de  ostiones. — Se  echan  los  ostiones  en  manteca 
y  aceite,  se  agrega  ajo  molido  y  pimienta  y  se  deja  hervir 
hasta  que  estén  secos,  pues  de  ningún  modo  se  les  ha  de 
echar  agua.  Se  sazona  con  sal  y  vinagre. 

867.  Oíros. — Se  fríen  en  acite  ajo,  cebolla  perejil  y  to- 
mate molido.  Ta  que  está  bien  refrito  se  echan  los  ostiones 
y  un  polvo  de  canela,  clavo  y  pimienta,  azafrán,  un  poco  de 
harina  dorada,  perejil  y  vinagre. 

868.  Ostiones  en  eoncAo.— Se  fríen  en  aceite  y  manteca 
ajos  machacados;  después  de  lavados  en  su  misma  agua  se 
echan  los  ostiones  á  que  se  frían  dejando  consumir  el  agua 
que  despiden  y  procurando  que  no  queden  jugosos.  Se  qui- 
tan de  la  lumbre,  se  les  polvorea  con  pimienta  muy  fina,  se 
les  echa  perejil  y  zumo  de  limón,  probándolos  para  ver  que 
no  queden  salados.  Después  de  esto  se  van  poniendo  en  las 


264 

conchas  con  pan  rallado  por.  encima.   Luego  te  ponen  en  la 
parrilla  con  lumbre  por  encima. 

869.  Ostiones  á  la  italiana. — Se  escaldan  en  agua  i  fuego 
manso  sin  dejarlos  hervir;  se  sacan  y  se  echan  en  otra  fria; 
se  sacan  después  y  se  secan  con  una  servilleta,  luego  se  po- 
nen en  salsa  de  anchoas  molidas.  8e  vuelven  4  calentar  y 
se  sirven.  v 

870.  Ostiones  en  jigote. — Se  echan  en  agua  caliente  cin- 
cuanta  ostiones ,  y  cuando  se  va  á  romper  el  hervor,  se  sa- 
can y  ponen  en  agua  fría.  Se  enjugan  después  y  se  pican 
menuditos,  y  se  les  puede  añadir  carne  de  otro  pescado  si 
hay  oportunidad.  Se  pone  en  una  cacerola  manteos,  pere- 
jil y  cebollas  tiernas,  se  rehogan  después  añadiendo  un  pol- 
vo de  harina  y  medio  vaso  de  vino  blanco.  Se  echa  todo 
esto  en  los  ostiones  dejando  que  hiervan  hasta  que  se  con- 
suma todo  el  liquido.  Cuando  se  vayan  á  servir  so  mezclan 
con  tres  yemas  de  huevo  desleídas  con  nata. 

Puede  emplearse  la  misma  salsa  para  los  camarones,  los 
cangrejos  y  demás  mariscos. 

871.  Ostiones  en  guiso  de  empanada. — Piqúese  bastante  re- 
caudo de  jitomate,  cebolla,  ajo  y  perejil;  póngase  4  freír 
manteca  y  cuando  este*  ya  bastante  quemada  se  le  agrega 
aceite;  estando  caliente  se  le  echa  el  recaudo  con  alcaparras 
y  aceitunas  picadas;  estando  todo  frito  se  le  echan  los  ostio- 
nes con  una  parte  de  su  propio  caldo,  procurando  que  el 
guiso  quede  algo  espeso.    Échese  sal  y  déjese  sazonar. 

Este  guiso  sirve  para  cualquier  pescado  fresco  6  salado. 

K72.  Ostiones. — Se  muele  un  poco  de  pan  abizcochado  y 
un  poco  de  pimienta;  se  fríe  cebolla  picada  muy  menudita, 
perejil  también  muy  menudo  y  se  sancochan  en  aceite  y 


265 

manteca;  te  le  ponen  después  de  sancochado  dos  cucharadas 
de  pan  con  pimienta  y  perejil;  se  le  agrega  vinagre,  tomillo 
y  unas  hojas  de  laurel;  se  lavan  bien  los  ostiones  para  que 
suelten  toda  la  salmuera  y  se  ponen  en  la  salsa;  déjeseles 
hervir  un  rato,  apéeseles  de  la  lumbre  y  póngaseles  aceite. 

873.  Ostiones. — Se  pica  ajo  muy  menudo  y  se  fríe  en  acei- 
te en  fuego  lento  para  que  cuezan  bien ;  póngasele  pan  ralla- 
do y  cuando  este*  bien  frito  agregúesele  perejil  sumamente 
menudo,  pimienta  en  polvo  y  zumo  de  limón  y  mas  aceite; 
óchense  los  ostiones  con  su  propio  caldo  pero  en  poca  can- 
tidad, porque  deben  quedar  secos. 

874.  Ostiones  en  «tu  conchas. — Se  abren  cuatro  docenas  do 
ostiones,  se  arrancan  de  sus  conchas  y  se  les  da  un  hervor  en 
la  misma  agua  que  han  arrojado.  Se  apartan  del  fuego,  se 
pone  una  poca  de  mantequilla  en  una  cazuela,  cebollas  muy 
tiernas  picadas  y  perejil.  Hágase  rehogar  añadiendo  una 
cucharada  de  harina  y  se  desleirá  todo  con  sustancias,  caldo 
y  medio  vaso  de  vino  blanco.  Cuezase  todo  y  redúzcase  es- 
ta salsa  echando  en  ella  los  ostiones.  Deben  separarse  las 
conchas  mas  grandes  y  limpias,  y  después  de  bien  lavadas, 
se  pone  en  cada  una  de  ellas,  tres  6  cuatro  ostiones  con  la 
salsa  competente,  cubriéndolos  con  pan  rallado  y  una  poca 
de  mantequilla;  al  momento  de  servidos  se  ponen  sobre  pa- 
rrillas, que  se  cubrirán  con  un  comal  muy  lleno  de  lumbre 
y  así  se  dejarán  unos  cuantos  minutos. 

875.  Otros, — Se  arrancan  de  la  concha  y  se  hace  que  den 
un  hervor  en  su  misma  agua;  se  apartan  del  fuego  y  se  ha- 
cen saltar  sin  que  hiervan,  con  un  pedazo  de  manteca,  pere- 
jil, pimienta  quebrantada  y  zumo  de  limón.  Se  ponen  tres 
ó  ouatro  en  cada  concha,  que  ha  de  estar  bien  lavada.  En 


966 

seguida  se  pone  en  las  parrillas  retirándolas  en  cnanto  han 
dado  un  hervor. 

879.  Ostiones  en  sartén. — 8e  les  hace  dar  un  hervor  en  una 
casuela,  se  escurren  y  ponen  en  infusión  de  sumo  de  limón 
se  vuelven  á  escurrir,  se,empapan  en  masa  de  jitomate,  sal 
y  pimienta  y  se  fríe  con  perejil 

877.  Ostiones  en  leche.  — A  tres  cuartillos  de  leche  se  le  po- 
ne un  pocilio  de  harina  que  se  va  desliendo  con  la  misma  le- 
che/ para  que  no  se  formen  bolitas  y  quede  muy  suelta.  Se 
pone  i  la  lumbre  y  si  se  espesa  agregúesele  mas  leche;  dé- 
jese hervir  y  cuando  este*  ya  cocida  se  quita  la  leche  y  se 
vacia  en  la  misma  casuela  una  lata  de  ostiones  oon  la  mitad 
de  su  caldo.  Déjese  cocer  á  que  se  espese  y  póngase  en  el 
platón  oon  rebanadas  de  pan  tostado. 

878  Ostiones. — Se  ponen  las  oonohas  al  calor  de  la  lum- 
bre para  abrirlas  fácilmente.  Sáqueseles  bien  una  venita 
negra  que  tienen  al  abrirse,  despegúese  el  pescadito  de  la 
concha  con  un  cuchillo,  échesele  pan  rallado,  perejil  picado 
muy  menudo,  aceite,  sal  y  pimienta.  Ciérrense  las  conchas 
y  pónganse  al  rescoldo  hasta  que  esté  el  ostión  cocida  Se 
sirven  oon  las  mismas  conchas. 

879.  Ostiones  en  caldo. — Se  hace  un  refrito  de  cebolla,  to- 
mate y  ajo  con  unas  tajadas  de  chile  verde;  á  medio  freír  se 
les  agrega  clavo,  pimienta  y  canela,  todo  molido;  ya  frito 
se  echan  los  ostiones  y  si  quedan  secos  se  les  echa  un  poco 
de  su  misma  agua,  procurando.queden  caldosos.  Se  pica  pe- 
rejil y  se  añade  al  guiso  oon  un'  poco  de  vinagre  y  pan  ra- 
llado. 

880.  Otros  fritos.  — Se  onecen  los  ostiones  en  su  misma 
agua  y  cuando  han  dado  un  hervor  se  sacan  del  agua,  se  re- 


267 

vuelcan  en  harina  y  se  fríen  en  aceite  como  el  pescado,  pro- 
bando si  tiene  la  sal  nesesaria. 

881.  Otros. — Se  muele  pimienta  y  ajos;  se  ponen  á  freír 
en  manteca  y  se  echan  en  ella  los  ostiones  en  seco;  ya  con- 
sumida el  agua  que  despiden  se  les  echa  vinagre  y  orégano. 

882.  Ostiones. — Se  pica  menudo  mucho  jitomate,  cebolla 
y  perejil;  se  emplea  para  una  lata  de  ostiones  dos  onzas  de 
mantequilla  que  se  pone  á  freír;  cuando  está  quemada  se  le 
incorpora  medio  cuartillo  de  aceite  español;  ya  que  está  muy 
caliente  se  fríe  en  esa  mezcla  el  recaudo,  al  cual  se  añadirán 
muchas  alcaparras  y  aceitunas;  estando  todo  frito  échense 
los  ostiones  con  sal  si  les  faltare  y  déjese  á  fuego  manso  á 
que  espese. 

883.  Ostiones  marineros. — Se  pican  menudamente  cebo- 
llas muy  tiernas,  se  muelen  con  vinagre  y  pimienta  que  se 
batirán  muy  bien,  y  se  echa  un  poco  de  esta  salsa  en  cada 
uno  de  los  ostiones  acabados  de  abrir. 

884  Ostiones  en  parrilla. — Se  escogen  los  mas  gruesos  y 
se  parten;  se  pone  cada  uno  de  ellos  sobre  una  pelota  de 
mantequilla  amasada  con  perejil  y  especias;  se  ponen  en  las 
parrillas  y  en  cuanto  comienzan  á  hervir  se  sacan. 

885.  Mojarra*.— Se  fríen  las  mojarras  en  aceite  6  man- 
teca, y  aparte  se  fríen  ajos  picados  con  yemas  de  huevo  co- 
cidas y  molidas,  alcaparras  también  molidas,  y  una  vez  frito 
este  caldillo  se  le  agrega  agua;  ha  de  quedar  espeso  y  al  ser- 
virse se  le  afiade  aceite,  clavo  y  pimienta. 

888.  Otras. — Se  rebana  tomate,  ajo  y  cebolla;  se  pica  pe- 
rejil y  orégano  y  se  fríe  en  manteca;  se  le  echa  un  poco  de 
agua,  alcaparras,  una  parte  de  comino,  pimienta  y  clavo, 
aceite  y  vinagre,  se  fríen  aisladamente  las  mojarras  revol- 


268 

candólas  ante»  en  harina  y  se  las  echa  después  en  el  caldillo 
poco  antes  de  servirlas. 

887.  Salsa  especial  para  mojarras. — Se  oueoen  huevos,  ae 
les  sacan  las  yemas,  se  muelen  en  un  metate  mezclándoles 
migajon  de  pan  remojado  en  leche  y  un  poco  de  perejil  pa- 
ra que  le  de*  color,  se  le  pone  muy  poca  cantidad  de  agua, 
se  bate  muy  bien,  se  sancocha  en  mantequilla  y  con  esta 
salsa  se  bañan  las  mojarras  fritas  de  antemano. 

888.  Mojarras  con  sus  hueva** — Se  lavan  muy  bien;  des- 
pués se  sacan  del  agua;  se  enjugan  y  se  les  quita  la  hueva; 
se  echan  .en  una  sartén  aceite  y  manteca  y  se  fríen  las  moja- 
rras con  mucho  cuidado  procurando  que  no  se  partan; en  la 
misma  manteca  en  que  se  frieron  se  fríen  las  huevas  después 
de  partidas  en  rebanadas  muy  delgaditas,  se  sacan  y  en  la 
misma  manteca  se  fríen  rebanadas  4c  pan;  se  sacan  éstas  y 
siempre  en  la  misma  manteca  se  fríen  jitomates  picados  y 
cebolla  muy  menudita.  Muélase  la  mitad  de  la  hueva  que 
se  frió  junto  con  el  pan,  échese  con  el  jitomate  y  la  cebo- 
lla, añádase  un  polvo  de  pimienta,  un  poco  de  vinagre  y 
buena  cantidad  de  aceite;  déjese  aa  sonar  y  cuando  esté 
mójense  las  mojarras  con  esta  salsa  por  dentro  y  por  fuera, 
echando  sobre  ellas  lo  que  sobre  cuando  se  hayan  puesto 
ya  en  el  platón.  Agregúese  al  pescado  el  resto  de  las  huevas 
rebanadas  junto  con  rebanadas  de  pan  frito.  Recomenda- 
mos este  guiso. 

889.  Otras  mojarras»  — Se  limpian  y  fríen  en  manteca  has- 
ta dorarse.  Hecho  esto  se  bajan  de  la  lumbre  y  se  fríen 
muohos  ajos  picados  muy  menudos;  después  se  fríen  jito- 
mates, cebolla  y  perejil  también  picados.  Se  muelen  cla- 
vos» canela,  pimienta  y  cominos.    Se  echa  un  poco  de  agua 


269 

en  el  recaudo  y  se  fríe  todo  á  que  quede  espeso  y  algo  os* 
curo.  Pónganse  las  mojarras  en  un  platón  á  que  reciban  el 
vaho  de  la  sartén,  y  cúbraseles  luego  con  la  salsa  en  buena 
cantidad  á  que  sobrenade  el  pescado.  Se  pica  menudito  chi- 
le en  vinagre,  aceitunas,  alcaparras  y  un  poco  de  limón  6 
naranja  agria.     Sírvase  de  este  modo. 

890.  Mojarra*. — Limpias  y  lavadas  se  enjugan  enteras  y 
para  freirías  se  revuelcan  en  harina;  se  fríen  en  aceite  y 
manteca.  Se  asan  tres  6  cuatro  jitomates  y  se  muelen  con 
alcaparras,  perejil  fresco,  una  cabeza  de  ajo  mondada  y  la 
sal  necesaria.  Se  ponen  las  mojarras  en  un  platón  y  se  ba- 
ñan con  esta  salsa.  Se  agregan  chiles,  aceitunas,  alcaparras 
y  bastante  aceite  y  se  ponen  á  cocer  á  fuego  manso.  Puede 
guisarse  en  esta  salsa  cualquiera  otro  pescado. 

89 L  Pámpano  relleno. — Se  pone  á  remojar  el  pámpano; 
ya  que  está  desalado  se  enjuga  en  un  cotense;  se  ponen  á 
cocer  unos  huevos;  ya  que  están  bien  cocidos  so  mondan  y 
se  pican  en  pedacitos  grandes;  se  pica  un  poco  de  cebolla  y 
jitomate,  se  fríen  en  aceite  y  manteca  y  se  fríe  muy  bien; 
también  se  echa  el  huevo  bien  picado,  un  poco  de  perejil  y 
pimienta  en  polvo;  este  relleno  ha  de  quedar  seco;  se  relle- 
nan los  pámpanos  y  se  cosen  con  una  hebra,  se  pone  una 
sartén  con  manteca  y  aceite  y  allí  se  fríen  los  pámpanos  en- 
teros sin  quitarles  las  colas  ni  nada;  se  ponen  á  asar  unos 
jitomates,  se  muele  junto  con  un  poco  de  perejil  fresco,  un 
poco  de  orégano  y  tomillo;  esto  se  fríe  donde  se  frieron  los 
pámpanos,  se  les  echa  unos  gajos  de  cebolla  y  bastante  acei- 
te, ya  que  está  bien  frito,  se  le  echa  una  poca  de  agua,  se 
muele  clavo,  canela,  pimienta  y  se  le  eoha;  se  ponen  los 
pámpanos  en  una  sartén  ó  tortera  donde  quepan  enteros  y 


370 

extendido!,  te  echa  por  encuna  esta  taita  quo  ha  de  que* 
dar  espeta  y  te  adorna  con  chile*,  alcaparra*  y  alcaparrones. 

892.  Otro  pámpano  reÜetio. — Se  detala  el  pámpano,  y  te 
cnjugajnrocurando  que  no  este*  agujerado,  te  pica  nn  poco 
de  jitomate  tin  pepitas,  y  una  poca  de  cebolla  y  ajo  con  un 
poco  de  perejil;  ya  que  ettá  sancochado  te  echa  el  perejil 
y  jitomate  á  que  te  fría  mucho  y  todo  te  ha  de  freír  en  acei- 
te y  manteca ;"te  echa  un  poco  de  pimienta  y  de  tomillo,  ya 
que  todo  te  frió  mucho  te  le  echan  alcaparras,  aceitunas, 
tiras  de'chile'en  vinagre,  almendras,  pasas  y  unas  tiritas  de 
huevo  cocido  y  con  todo  lo  dicho  te  rellena  el  petcado, 
procurando  que  quede  apretado;  te  cote  con  una  hebra  de 
hilo  gordo,  tapone  una,  sartén  con  aceite  y  manteca  y  allí 
te  pone  á  freír  el  pámpano,  te  voltea  de  lado  con  mucho 
cuidado  para  que  no  te  desbarate,  y  quede  bien  frito  por 
los  dos  lados;  te  baja  de  la  lumbre  y  te  deja  en  el  mismo 
trasto. 

893.  Salsa  para  dicho  pámpano. — So  cuecen  unce  huevee 
y  muelen  las  yemas  junto  con  unas  alcaparras,  y  te  fríen  en 
aceite  y  manteca;  te  echan  unas  cebollas  en  gajo,  te  muele 
clavo,  canela,  pimienta  y  un  poco  de  tomillo,  no  te  le  debe 
echar  mas  agua  que  la  necesaria  para  moler  las  especias.  Se 
deja*  freir  todo  rauyébien  y  después  te  le  va  echando  por 
encima  el  pámpano,  te  echa  mucho  aceite  y  te  deja  hervir 
un  poeo,*y  deapuea  te  adorna  el  platón  con  chiles,  alcapa- 
rras y  aceitunas. 

894.  Lisa. — Se  emplea  ajo  según  el  tanto  de  petcado  que 
te^qutore  guisar;  para  cada  cuatro  lisas  se  emplean  dot  ca- 
beata  de  ajo¿eapeciaa  molidas  en  polvo,  clavo,  canela  y  pi- 
mienta en  abundancia,  laurel,  orégano,  hojas  de  naranjo, 


271 

vinagre  de  Castilla  y  aceíte'hasta  cubrir  el  pescado.  Se  po- 
ne á  cocer  todo  en  una  olla  tapada  sobre  otra  olla. 

896.  Otro.— Limpias  y  enjugadas  las  lisas  se  ponen  en 
una  sartén  con  aceite,  una  cabeza  de  ajo  machacada  y  se 
deja  freir;  ya  frita  se  muelen  especias  con  vinagre,  se  echan 
en  la  sartén  con  un  poco  de  orégano  de  China  y  mucho  vi- 
nagre y  se  dejan  hervir  á  fuego  manso. 

896.  Otro.— Se  fríen  en  manteca  dos  chiles  mulatos  y  se 
muelen  con  la  misma;  se  fríe  ajo  á  que  quede  trasparente, 
cebolla  y  jitomate;  so  echa  el  chile,  un  pedazo  de  pan  frito 
y  molido  para  que  espese  y  se  pone  el  pescado  en  esta  salsa. 

897.  lAaa  fría.  —Se  lava  bien  y  se  cuece.  Se  hacen  her- 
vir jitomates  enteros  y  cebollas  enteras  también,  que  se 
mezclan  después  de  quitar  á  los  jitomates  el  pellejo;  se  le 
añade  orégano  y  pimienta  en  polvo,  sal,  aceitunas,  un  pu- 
ñado de  alcaparras  y  aceite.  Al  ir  á  servir  el  pescado  se  em- 
barra con  esta  salsa.  Se  adorna  con  aguacate  y  tornachiles. 

898.  lÁta  atada. — Se  pica  un  manojo  de  cebolla  con  tres 
cabezas  de  ajos  muy  menudos;  se  echa  uncuartillo  de  aceite 
en  una  cazuela  y  se  fríe  lo  picado  agregando  orégano,  to- 
millo, clavo  y  pimienta,  el  jugo  de  un  limón,  un  puñado  de 
alcaparras  /sal  Se  embarra  una  tortera  de  manteca,  y  se 
cubre  el  fondo  de  jitomates  y  cebollas  rebanadas.  Se  hacen 
unas  incisiones  á  lo  largo  de  las  lisas  por  ambos  lados  y  ya 
que  están  preparadas  se  colocan  sobre  la  capa  de  cebolla  y 
manteca  que  están  en  la  tortera,  y  se  cubren  después  con 
todo  el  recaudo  anterior.  Se  pone  la  tortera  en  la  lumbre  y 
se  tapa  con  un  comal  con  bastante  lumbre  por  encima.  Ha 
de  quedar  con  muy  poco  caldo  y  como  asado.  Se  le  echa 
por  encima  aceite  y  chiles  en  vinagre.  * 


272 

899.  Camarones.— Se  ramo  jan  los  camaronea,  te  limpian 
y  ae  lea  quita  la  cáacsra.  Se  pica  media  caben  de  ajo  muy 
menudita,  un  poco  de  jitomate  sin  pepitas,  un  poco  de  ce- 
bolla y  perejil.  Se  frie  en  aceite  y  manteca  el  ajo  y  la  ce- 
bolla, ae  le  echa  un  poco  de  tomillo,  tal,  claro,  canela  y  pi- 
mienta con  unas  hebraa  de  azafrán,  todo  molida  Ya  que 
está  frito  ae  echa  en  el  recaudo  loa  camarones  y  chiles,  acei- 
tunas y  Alcaparras. 

900.  Camarones  frescos.  — Ya  limpios  los  camaronea  ae  po- 
nen á  oocer  con  un  poco  de  sal,  se  fríen  en  aceite,  se  les 
echa  pan  rallado,  pimienta  y  clavo,  unas  gotas  de  limón  y 
papaa  cocidas  y  partidas.  Póngasele  el  agua  suficiente  y  dé- 
jense hervir;  la  salsa  no  debe  quedar  ni  espesa  ni  aguada. 

901.  Quito  de  camaronee. — Calzase  un  poco  de  manteca; 
cuando  este*  agregúesele  un  poco  de  aceite  francés,  bastan- 
te cebolla  bien  picada,  perejil,  ajo  y  jitomate:  ya  bien  frito 
el  recaudo  se  echan  en  él  los  camarones  con  aceitunas,  alca- 
parras, pimienta  molida,  pan  remojado  y  un  poco  de  vina- 
gre, dejándolos  sazonar  con  sal  y  procurando  quede  salaita. 

902.  Camaronee  en  cortadillo  de  huevo. — Remojados  los 
camaronea  desde  el  dia  anterior  y  quitadas  las  cabezas,  oo- 
las  y  pies  se  lavarán  bien  en  dos  6  tres  aguas,  se  cocerán 
sin  sal,  se  volverán  á  limpiar  de  todos  los  pellejos  que  les 
quedan,  y  se  freirán  en  manteca  con  chiles  anchoa  remoja- 
dos y  molidoa  con  ají*;  así  que  están  se  echan  en  el  frito 
loa  camarones,  el  agua  en  que  se  cocieron,  sal  y  huevos  me- 
dio batidos,  moviéndolos  seguido  cuando  se  echen  para  que 
no  se  hagan  bolas.  Después  que  han  hervido  bien,  deben 
quedar  en  un  caldo  ni  espeso  ni  aguado.  Se  les  agregan  pa- 
pas cocidas  en  trocitos. 


273 

.  903.  Hueva. — Se  pone  á  desalar  en  ana  servilleta  y  ya 
que  se  siente  el  agua  que  no*  está  muy  salada,  se  pone  á  es- 
currir hasta  que  ya  no  le  sale  agua,  se  enjuga  en  un  lienzo 
seco  y  se  pone  á  freír  en  una  sartén  grande  para  poderla 
voltear  sin  que  se  rompa;  se  le  quita  un  pedazo  estando  ya 
frita  y  fuera  de  la  sartén  y  éste  se  muele  con  unos  dientes 
de  ajo  fritos  y  un  pedazo  de  pan  frito  también;  antes  de 
molerla  se  echa  en  manteca  y  aceite  y  unas  pimientas,  y  en 
el  mismo  trasto  en  que  se  fría  la  hueva  se  fríe  este  recaudo, 
agregándole  mas  aceite,  y  estando  sazonado,  por  supuesto 
sin  echarle  agua,  se  pone  la  hueva  en  un  peatón  y  se  baña 
con  esta  salsa;  se  agrega  cebolla  rebanada  y  perejil  picado. 
904.  Hutta  asada. — Se  echan  las  huevas  en  agua  de  un 
dia  para  otro;  se  secarán  cuidando  de  que  no  se  rompan;  se 
pone  un  papel  en  la  parrilla  untado  con  manteca  por  enci- 
ma; la  hueva  se  pone  á  la  lumbre  untándola  también  con 
manteca  por  encima  y  se  deja  así  hasta  que  se  empape  bien 
y  quede  dorada;  se  pone  en  el  plato  con  cebolla,  aceite  y 
chiles  encurtidos.  También  se  hace  la  hueva  en  ensalada 
cociéndola  dentro  de  una  servilleta,  pero  ha  de  estar  el  agua 
hirviendo  para  echarla  y  no  muy  apretada  en  la  servilleta; 
se  le  quita  el  pellejo,  se  corta  en  rebanadas  y  se  pone  en  un 
plato  con  alcaparras  picadas,  perejil  menudo,  aceitunas, 
orégano,  chiles  encurtidos,  cebolla  picada,  aceite  y  vinagre. 
906.  Guisado  de  Ateces — Se  lavan  las  huevas  y  se  reba- 
nan; se  muele  un  pedazo  de  pan  abizcochado  y  un  poco  de 
sal  pimienta,  ea  este  polvo  se  revuelcan,*  luego  se  fríen  en 
manteca  á  un  fuego  manso;  después  se  ponen  en  un  platón 
con  aceite  y  vinagre  y  se  adornan  con  chiles,  cebolla  y  acei- 
tunas. 

LA  OOdNE&A  POBLANA. — TOM. — L  18. 


274 

906.  Hueva  en  enmdada. — Se  meten  las  hueras  frescas  en 
ana  servilleta  y  se  amarra  flojo  á  que  quede  como  bolsa;  en 
la  noche  anterior  se  pone  en  agua.  Al  otro  dia,  después  de 
amarrada  como  dijimos,  se  mete  en  una  olla  la  servilleta  y 
se  deja  hervir  el  agua.  Ya  cocida  la  hueva  se  saca  7  se  le 
quita,  todo  el  pellejo,  se  desgrana  en  un  plato  con  una  ca- 
chara, se  pican  alcaparras,  aceitunas,  perejil,  orégano  re- 
fregado, cakbacitas,  chiies  encurtidos  7  cebolla;  se  mezcla 
todo  esto  con  aceite  7  vinagre  7  se  roda  la  hueva. 

PESCADOS  EN  GENERAL. 

007.  Peicado  con  chícharo*. — En  un  poco  de  manteca  bien 
caliente  se  frie  harina  hasta  que  este*  muy  dorada;  se  le 
echa  ajo  7  cebolla  picada,  7  7a  que  todo  está  frito  se  aña* 
de  agua  caliente  7  se  menea  bien  para  que  no  se  corte;  si 
espesa  mucho  se  agrega  mas  agua  sin  dejar  de  menear  has- 
ta que  quede  el  caldo  aguado.  Se  ponen  después  alcapa- 
rras picadas,  pimienta,  clavo,  perejil,  orégano  7  unos  chí- 
charos 7a  cocidos,  7  se  echa  el  pescado  crudo  á  que  cues» 
con  ese  caldo. 

908.  Otro  pescado. —Se  pone  á  calentar  aceite  7  manteen, 
se  pica  muy  menuda  una  cabeza  de  ajo  y  se  fríe  hasta  que 
dore;  ya  en  este  estado  se  hace  freír  media  tasa  de  cebolla 
picada,  un  poco  de  perejil  también  picado,  dos  ó  tres  jito- 
mates sin  pellejo,  chilchotes  rajados:  cuando  empiece  á  dos- 
pedir  la  manteca  se  le  agrega  tm  poco  de  clavo  y  comino 
remolidos,  medio  chile  ancho  ó  mulato  y  una  rebanada  de 
pan  frito  molido.  Ta  que  esté*  frito  se  echa  el  pescadoirito 


275 

anteriormente  á  que  dé  unos  hervores  en  el  caldo.  Al  po- 
nerlo en  el  platón  se  adorna  con  aceitunas,  alcaparras  y  re- 
banadas de  pan  frito  en  aceite.  Antes  de  apartarlo  de  la 
lumbre  se  le  echa  un  poco  de  vinagre  de  Castilla,  laurel  y 
un  polvo  de  pimienta.  Ya  que  está  en  el  platón  un  poco 
de  aceite. 

909.  Pescado  á  la  minuta, — Limpio  y  hecho  pedazos  el 
pescado,  se  le  quitan  las  espinas,  se  sala  y  se  deja  escurrir 
y  se  deja  así  tres  6  cuatro  horas.  Una  antes  de  comer- 
lo se  pone  en  zumo  de  limón  con  orégano.  Se  baten  hue- 
vos con  polvos  de  galleta  y  no  se  deja  cuajar,  se  revuelca 
el  pescado  en  esta  salsa  y  se  fríe  en  aceite  y  manteca. 

910.  Pescado  en  salsa  amarilla. — Poco  antes  de  servir  la 
comida,  se  pone  en  la  lumbre  una  cazuela  con  aceite  y  man- 
teca en  cantidad  igual  y  en  proporción  á  la  cantidad  de  pes- 
cado. En  cuanto  hierva  se  le  echan  jitomates,  pimientas, 
ajos  y  cebollas  todo  muy  picado.  Cuando  está  frito  se  le 
echa  agua  á  que  cubra  el  pescado;  cuando  hierve  mucho  se 
sazona  con  clavo,  pimienta  negra  y  pimienta  de  Tabasco  to- 
do molido.  Entonces  se  pone  el  pescado  en  el  caldo  á  que 
se  cueza.  Se  le  añade  azafrán  molido  hasta  que  tome  un 
color  amarillo  claro.  Se  coje  una  torta  de  pan,  que  debe 
haberse  puesto  en  remojo  desde  antes  y  se  remuele  con 
salsa  del  pescado;  se  agrega  el  pan  al  guiso  y  se  deja  freír 
para  que  no  quede  crudo. 

911.  Pescado  asado. — Después  de  limpio  se  le  hacen  unas 
incisiones  desde  la  cabeza  á  la  cola,  se  unta  bien  por  den- 
tro y  por  fuera  con  sal  y  pimienta  molidas,  aceite  en  buena 
cantidad  en  el  que  se  exprime  un  limón.  Una  vez  que  el 
pescado  está  bien  embarrado  se  unta  un  papel  con  manteca 


276 

y  aceite,  te  le  echa  un  poco  de  perejil  picado,  te  envuelve 
bien  el  pescado  y  se  deja  cocer  á  dos  fuegos  lentos. 

912.  Otro  con  jitomate. — Para  seis  libras  de  pescado  se 
ponen  veinte  jitomates  grandes  molidos  con  bastantes  ajos 
también  molidos,  estos  últimos  se  fríen  aparte  á  que  se 
quemen  en  aceite  español  y  manteca;  ya  que  estén  se  lee 
echan  los  jitomates  molidos,  y  al  romper  el  hervor  se  van 
metiendo  en  la  cazuela  las  rebanadas  de  pescado,  después 
de  haberle  escamado  y  secado  bien  con  un  trapo.  8e  echa 
la  sal  pimienta  molida,  chiles  en  vinagre,  aceitunas,  alca- 
parras y  vinagre.  Se  deja  consumir  el  agua  que  suelta  el 
jitomate  para  que  solo  quede  la  manteca  y  el  aceite. 

913.  Peleado  enharinado. — Limpio  y  sin  espinas  se  deja 
orear,  se  polvorea  con  sal  y  pimienta,  se  revuelca  en  harina 
hasta  que  se  embarre  bien,  se  rocía  con  limón  y  naranja,  y 
se  fríe  en  manteca.     Sírvase  sin  hacer  otra  cosa» 

914.  Pescado  en  caldo  de  pobn. — Se  pone  á  calentar  man- 
teca y  aceite,  se  rocía  con  harina  y  se  pone  á  que  se  medio 
dore;  se  rocía  con  pimienta  en  polvo;  se  le  echa  agua,  vi- 
nagre, laurel  y  orégano.  Ta  que  está  sazonado  se  deja  her- 
vir y  se  le  echa  aceite  por  encima. 

916.  Peleado  con  chile  ancho. — Se  mude  chile  ancho  re- 
mojado con  ajos,  pimienta,  clavo  y  canela,  y  se  fríe  en  man- 
teca con  cebolla;  ya  que  está  á  medio  freír  se  deslié  con 
agua,  un  poco  de  pan  molido  y  mojado,  se  deja  cocer  en  ese 
caldo  el  pescado  crudo;  se  añade  orégano  en  polvo  y  vi* 
nagre. 

916.  Otro  con  chile  ancho. — Se  pone  á  hervir  aceite  y 
manteca  con  tomate. y  cebolla  en  proporción;  en  el  refrito 
se  van  colocando  las  tajadas  de  pescado  y  mientras  dan  el 


277 

primer  hervor,  se  muelen  dos  dientes  de  ajo,  dos  chiles  an- 
chos, una  raja  de  canela,  unos  granos  de  pimienta  y  un  po- 
co de  comino.  Bájese  esto  del  metate  con  bastante  aceite, 
y  se  batirá  todo  con  un  trinche,  y  se  irá  echando  encima 
del  pescado  que  se  pondrá  á  fuego  manso,  tapando  la  ca- 
zuela. " 

917.  Otro  de  pescado. — Se  pica  una  cantidad  regular  de 
rabos  de  cebolla  y  como  la  mitad  de  perejil;  se  fríe  esto  en 
manteca  con  unos  dientes  de  ajo  y  se  muele  todo  junto  con 
un  pedazo  de  pan  frito  también  en  manteca.  Se  vuelve  á 
freír  todo  lo  molido  en  poca  manteca  y  bastante  aceite,  y  al 
estarse  friendo  se  le  echa  un  polvo  de  pimienta.  Una  veas 
que  ya  está  bien  frito  se  echa  una  poquita  de  agua,  nada 
mas  la  suficiente  para  que  sazone  y  se  echa  allí  el  pescado 
que  ya  debe  estar  frito  en  aceite  y  se  deja  en  el  fuego  hasta 
que  quede  nada  mas  una  salsita  mantecosa.  Sirve  para  to- 
da clase  de  pescado. 

918.  Quinado  para  pescado. — Se  pica  bastante  perejil  me- 
nudito,  chile  verde,  tomate  y  ajo;  se  pone  á  freír  muy  bien, 
se  le  agrega  una  poquita  de  canela  en  polvo,  sal  competente, 
garbanzos  cocidos,  aceite  de  comer  y  una  friolera  de  vina- 
gre, y  se  sirve. 

919.  Otro.  — Se  pican  cebollas,  ajos,  jitomates,  chiles  ver- 
des, perejil  y  yerbabuena;  todo  se  fríe  en  manteca,  y  tam- 
bién se  fríe  un  poco  de  harina  dorada  y  se  revuelve  con  el 
recaudo  frito;  se  le  echa  un  poco  de  caldo  del  en  que  se  co- 
ció el  pescado,  aceitunas,  alcaparras  picadas  y  un  poquito  de 
vinagre. 

920.  Escabeche  de  Ferocrwz. — Después  de  limpio  el  pesca- 
do y  desalado  si  no  fuere  fresco,  se  parte  en  trozos,  capaces 


278 

de  caber  en  nn  cuñete:  ae  pone  á  freír  en  aceite;  ae  aparta 
y  se  deja  enfriar.  En  nuevo  aceite  te  fríen  bastantes  cábe- 
las de  ajo  machacadas,  tomillo,  laurel,  orégano,  limón  en 
rebanadas,  si  no  f  aere  salado  el  pescado,  también  saL  Cuan- 
do todo  se  haya  frito  bien  se  le  echa  vinagre,  pimienta  de 
Tabasco  entera,  y  cuando  todo  esté*  ya  bien  sazonado,  se 
aparta  y  se  deja  enfriar;  ya  que  esté*  bien  frío,  se  pone  en  el 
cuñete  una  capa  de  pescado  y  se  le  despolvorea  un  poco  de 
orégano  y  tomillo,  hojas  de  laurel  y  una  que  otra  rebanada 
frita  de  limón,  se  baña  con  las  yerbea,  y  así  ae  van  ponien- 
do hasta  llenar  el  cuñete  que  se  acaba  de  llenar  con  aaeite 
crudo;  ae  tapa  muy  bien  y  á  loa  ocho  diaa  ae  puede  comer. 

921.  Otro. — Se  limpia  el  pescado,  y  hecho  lonjea  en  cru- 
do, ae  fríe  en  manteca  hasta  que  ae  cueza  bien  y  ae  dore. 
Se  hierven  agua  y  vinagre  en  partea  iguales  con  aal,  y  ae  le 
echa  culantro  tostado,  pimienta  y  canela,  todo  molido  y  pro- 
porcionado al  caldillo,  y  unaa  hojas  de  laurel;  ae  pone  al  fue- 
go en  una  cazuela  á  que  hierva;  catando  el  pescado  frío,  ae 
van  acomodando  en  un  cuñete  n*  olla  laa  lonjas  y  ae  va  echan- 
do un  polvo  de  laa  miamaa  especias  que  ae  echaron  al  caldi- 
llo. A  cada  capa  del  pescado  ae  añade  caldillo,  laurel,  y  ae 
cubre. 

922.  Becahtehe  de  peleado. — Se  fríen  en  manteca  unoa  dien- 
tes de  ajo,  procurando  que  guarden  proporción  con  la  can- 
tidad de  pescado.  Se  aparta  de  la  lumbre  la  cazuela  y  ae  le 
echan  doa  tantos  de  vinagre  y  uno  de  aceite,  pimienta  de 
Castilla  y  de  Tabasco  en  mayor  cantidad,  clavo,  laurel,  oré- 
gano y  cominos;  se  pone  en  infusión  un  rato  y  después  de 
frito  el  pescado  se  echa  en  el  caldo. 

929.    Salea  para  pescado  con  salsa  de  anchoa*. — Se  bate 


279 

ana  yema  de  huevo  cocido  con  una  rebanada  de  pan  frito  en 
aceite,  con  claro,  canel  i  y  pimienta,  ae  echa  á  freir  en  el 
mismo  aceite  en  que  se  frió*  el  pescado  á  que  no  se  fría  mu- 
cho; se  pone  un  poquito  de  agua  en  esta  salsa;  se  echa  el 
pescado  ya  frito,  si  es  entero  se  le  embarra  de  esta  misma 
salsa  por  dentro  y  por  fuera,  y  después  se  vuelve  á  untar  con 
salsa  de  anchoas,  ya  no  se  vuelve  al  fuego.  Se  pone  6  al 
vaho  de  una  olla  6  en  una  hornilla  caliente  Se  adorna  el 
platón  con  rebanadas  de  pan  fritas  y  untadas  de  salsa  de  an- 
choas. 

924.  Pencado  á  la  baronesa. — Después  de  cocido  el  pesca- 
do entero  se  pone  en  un  platón  para  que  se  enfrie,  y  al  irse 
á  servir  se  baten  yemas  de  huevo,  incorporándoles  media 
botella  de  aceite  franoes,  sal  molida  y  un  poco  de  vinagre. 
Revuelto  todo  se  cubre  el  pescado  con  esta  salsa,  ador- 
nándolo con  hojas  de  lechuga  y  rábanos.. 

925.  Pencado  al  uto  de  lo*  peleadores. — Se  ponen  las  taja- 
das de  pescado  crudo  en  una  cazuela  y  se  le  eohan  encima 
ajos  picados,  cebolla,  jitomate,  cominos,  pimienta  de  Casti- 
lla y  unas  hebras  de  azafrán  molidas  con  un  poco  de  agua  y 
vinagre.  Bien  tapada  la  cazuela  se  pone  á  cocer  á  dos  fue- 
gos, se  le  echa  aceite  y  sal  suBciente,  y  se  deja  cocer. 

926.  Pescado  alcaparrado. — Se  muele  una  buena  cantidad 
de  alcaparras  con  un  pedazo  de  pan  remojado  y  unos  dien- 
tes de  ajo  pelados;  se  fríe  todo  en  manteca  y  aceite;  ya  fri- 
to se  incorpora  el  pescado  ya  cocido.  Si  estuviere  entero  se 
pone  en  un  platón  y  se  rocía  todo  él  con  esta  salsa. 

927.  Albóndiga*  do  pescado. — Se  pica  el  pescado  crudo  y 
sin  espinas.  Se  pone  en  una  cazuela;  se  le  echa  recaudo  fri- 
to, huevo  crudo  y  cocido,  limón,  pan  mojado  j  molido 


280 

pedas  finas,  aceite  y  perejil  picado.  Se  bate  todo  junto,  te 
hacen  las  albóndigas  y  se  van  echando  en  el  caldo  ya  que 
hierre.  El  caldo  se  hace  friendo  todo  el  recaudo  con  las  es- 
pecias. Ta  que  está  frito  se  le  echa  un  poco  de  agua  y  sal. 
Una  ves  cocidas  las  albóndigas,  al  apartarlas  se  les  echa  un 
poco  de  aceite,  vinagre  y  perejil  picado. 

928..  Otro  pescado. — Se  fríe  el  pescado,  se  muelen  ajos, 
cominos  y  pimienta  de  Castilla  y  se  fríe  con  una  buena  can- 
tidad de  jitomates  bien  maduros,  un  chile  verde  y  cebolla 
en  pedazos  grandes,  machacándolos  con  la  cuchara.  Guan- 
do ya  está  frito  se  aparta  y  poco  antes  de  llevarlo  á  la  mesa 
se  le  baña  con  una  salsa  compuesta  de  cebolla  cocida  en  pe- 
dazos grandes,  orégano  despolvoreado,  aceite  y  vinagre. 

929.  Pescado  asado. — Después  de  bien  escamado  y  limpio 
se  le  quita  la  cabeza  y  bien  enjuto  con  una  servilleta,  so 
pone  en  las  parrillas  hasta  que  tomen  buen  color  dorado,  con 
fuego  manso;  después  se  echa  en  una  cazuela  ó  sartén  un 
cuarterón  de  mantequilla  para  cada  dos  libras  de  pescado; 
se  derrite,  quitando  la  espuma;  añádase  medio  cuartillo,  de 
vino  blanco,  pan  rallado  y  perejil;  se  hace  una  salsa  dándo- 
le un  par  de  hervores,  y  se  rocía  el  pescado  con  esta  salsa  a] 
tiempo  de  servirlo. 

9801.  Pescado  en  aceite. — Se  hace  como  el  anterior,  solo 
que  en  lugar  de  freír  mantequilla  se  fríe  aceite  con  ajos,  pi. 
mienta,  un  poco  de  vinagre  y  agua;  en  esta  salsa  se  echa  el 
pescado,  sirviéndole  muy*  caliente. 

931.  Pescado  escabechado. — Se  limpia  parte  en  rajas  y  fríe 
en  aceite;  cuando  esté  ya  frío,  se  coloca  en  una  olla  grade, 
limpia,  que  no  esté  vidriada,  y  se  llena,  mitad  del  agua  y 
vinagre  fuerte,  unas  rajas  de  limón  y  hojas  de  laurel  verde; 


281 

á  las  veinticuatro  horas  que  este*  en  esta  salmuera  puede  ser- 
virse 6  dejarlo  hasta  que  sea  necesario. 

932.  Pescado  en  salsa. — Después  de  limpio  se  parte  en  tro- 
sos  y  se  pone  en  una  cazuela  friándolos  en  aceite,  perejil 
picado  y  un  diente  de  ajo;  rehogúese  á  fuego  lento,  sazone, 
se  bien  de  sal  molida,  y  añádase  con  caldo  6  agua,  y  para 
espesarse  la  salsa  se  machaca  nn  pedazo  de  pan  tostado  y  se 
le  echa. 

033.  Pescado  con  salsa  de  avellana*. — Después  de  limpio 
se  elige  un  buen  trozo  del  medio  6  de  la  cola;  cuezase  con 
sal  en  agua  ó  vino  blanco;  mójense  después  pifiones  6  ave- 
llanas,  un  poco  de  perejil,  un  ajo  pequeño  y  un  poco  de  pan 
tostado;  muélase  todo  esto  y  viértase  sobre  la  cazuela  donde 
se  cuece  el  pescado  desatando  este  compuesto  con  caldo,  vi- 
no ó  agua,  y  sírvase  después  de  haber  dado  un  hervor. 

934.  Albondiguilla»  de  pescado. — Después  de  bien  lavadas 
se  separan  las  espinas  y  el  pellejo,  y  la  carne  se  pica  muy 
menuda;  bátanse  una  cantidad  suficiente  de  huevos  con  pe- 
rejil y  cebolla  frita  machacada,  añadiendo  un  polvito  de 
azúcar;  se  revuelve  el  pescado  con  esta  composición  y  se  ha- 
cen las  albondiguillas;  que  deben  f reine  en  aceite.  Si  se 
quiere  ponerlas  con  salsa,  se  echa  en  el  mismo  aceito  en  que 
se  han  frito  un  poco  de  harina  y  unas  gotas  de  vinagre,  re. 
vuélvase  bien  y  añádase  un  poco  de  agua  tibia;  para  dar 
cuerpo  á'esta  salsa  se  muelen  dos  albondiguillas  con  un  po- 
co de  cebolla  frita,  6  un  poco  de  jitomate  también  frito. 

936.  Modo  de  cocer  con  poco  caldo  ¡os  pescados.  — Después 
de  escamados  y  limpios,  se  les  baña  con  vinagre  hirviendo, 
é  inmediatamente  se  cubre  el  platón  donde  se  ponga  con 
una  tapadera  y  con  algún  paño  húmedo  para  que  no  se  salga 


282 

al  vapor,  pando  un  cuarto  de  hora  se  atoan  y  se  echan  en 
un  caldero  de  agua  hirviendo  con  nn  poco  de  sal,  hojas 
de  laurel  y  cebolla,  y  después  que  esté*  el  pescado  cocido, 
se  retira  del  fuego  y  se  le  echa  un  poco  de  agua  fría,  deján- 
dolo así  hasta  que  se  vaya  á  servir,  que  se  hace  poniéndolo 
encima  de  una  servilleta  doblada  para  que  conserve  así  el 
color.  Este  modo  se  llama  al  axtd  ó  caldo  corto. 

936.  Adobo  para  peces  de  toda»  clases. — Pártanse  los  pes- 
cados de  la  clase  que  sean  en  trox-»  ó  lonjas,  póngase  en 
una  cacerola  con  sal,  especias,  cebolla  picada,  sumo  de  li- 
món ó  vinagre,  rehogúese  hasta  que  este*  cocido  revolvién- 
dolo y  á  fuego  lento,  se  sacan  los  trosos  del  pescado;  rodán- 
dolos de  harina  y  f riéndolos  con  perejil. 

937.  Caldo  corto  de  pescado*. — Póngase  al  fuego  una  ca- 
cerola con  manteca,  zanahorias,  cebollas,  apio,  nabos  y  otras 
legumbres  cortadas  menudamente,  añádase  el  pescado  en 
trosos,  se  moja  en  un  poso  de  agua,  y  cuando  está  en  sacón 
se  le  pone  agua  hirviendo  con  sal  y  un  ramillete;  se  pasa 
todo  por  tamis  de  seda  para  los  usos  necesarios. 

TORTAS. 

938.  Modo  deformar,  hacer,  cocer  y  servir  toda clase  de  tor- 
toe,  sean  de  carne  ó  vigilia. — Hágase  sobre  la  tortera  nn  sue- 
lo ó  fondo  de  torta  extendiendo  una  hoja  de  masa  cortada 
del  canto  de  medio  peso,  coloqúese  encima  la  carne,  aves, 
pescado  ó  cualquiera  otra  cosa  de  que  se  quiera  hacer  la  tor- 
ta; llénese  los  huecos  con  albondiguillas  de  carne  ó  vigilia, 
según  la  clase  de  torta;  se  sasona  á  buen  gusto  añadiendo 


283 

yerbas  finas,  se  cabré  el  iodo  con  lonjas  de  tocino;  hecho 
esto,  se  coloca  por  encima  otra  hoja  de  masa,  se  humedecen 
las  orillas  de  las  dos,  pellizqúense  para  unirlas,  y  fórmese 
el  borde  dándole  vuelta  al  rededor  con  el  dedo.  Bátase  la 
yema  y  clara  de  un  huevo  y  dórese  con  ello  la  parte  de  arri- 
ba de  la  torta,  bien  sea  con  un  pincel  ó  una  pluma.  De  este 
modo  preparada,  se  mete  en  el  horno  no  muy  caliente.  Sa- 
qúese al  cabo  de  un  cuarto  de  hora  y  hágase  un  pequeño 
agujero  en  medio  de  la  tapa  para  que  el  humo  se  evapore; 
vuélvase  al  horno  hasta  que  esto  concluida  de  cocer.  Guan- 
do se  vuelve  á  sacar  se  levanta  la  tapa,  cortándola  al  ras 
del  filete.  Se  quitan  las  lonjas  de  tocino,  las  yerbas  y  se 
echa  bien  caliente  el  guiso  que  convenga,  según  su  especie. 
939.  Torta  de  guajolote. — Limpio  el  guajolote  se  pondrá 
á  cocer  entero  en  agua  con  sal,  ajos  machacados,  laurel  y 
tomillo,  y  así  que  esto  cocido  se  ataca,  y  sobre  una  mesa  se 
le  irá  quitando  con  mucho  cuidado  todo  el  pellejo,  comen- 
zando desde  el  pescuezo,  menos  los  alones;  de  las  pechugas 
y  cuadriles  se  harán  rebanadas,  y  ya  que  está  se  unta  bien 
una  cazuela  con  manteca,  se  pondrá  el  pellejo  con  lo  exte- 
rior de  él  para  el  centro  de  la  cazuela,  y  untándolo  de  man- 
teca ya  quemada,  con  ajos  molidos,  en  él  se  acomodarán  las 
rebanadas  de  los  cuadriles,  encima  de  éstas  el  picadillo, 
agregándole  alcaparras,  aceitunas,  tornachiles  en  cuartos, 
rebanadas  de  chorizos,  tiras  de  jamón,  todo  cocido,  pimien- 
ta, y  encima  de  esto  las  rebanadas  de  las  pechugas,  bien 
empapadas  en  la  manteca  con  ajos  molidos,  y  puesto  todo, 
se  irá  cubriendo  con  el  mismo  pellejo  que  debe  haber  que- 
dado fuera  de  la  cazuela,  y  cuando  esté*  tapada  (que  enton- 
ces queda  el  pellejo  con  lo  exterior  para  fuera)  se  unta  bien 


284 

de  la  misma  manteca  y  se  mete  al  horno  no  fuerte,  6  se 
pondrá  á  dos  fuegos  suaves,  cuidando  de  que  no  se  queme, 
y  así  que  esté*  se  adornará  con  cuartos  de  huevo  cocido,  ho- 
jas de  perejil,  alcaparrones,  aceitunas  y  tornachiles  en  cuar- 
tos. 

940.  Otra  de  pollo  tapado  y  rtüeno* — Cocido  el  pollo  se 
rellena  con  un  reboltillo,  hasta  estar  cuajado  y  seco,  y  se 
le  agregarán  pasas,  almendras,  aceitunas,  alcaparras  y  tro- 
citos  de  jamón,  y  bien  puesto  de  las  piernas  para  que  no  se 
amiga,  y  oon  los  alones  que  no  estén  torcidos  sino  á  lo  natu- 
ral, se  freirá  en  manteca  oon  ajos  molidos  y  cuando  esté 
dorado,  se  saca  y  en  una  sartén  ó  cazuela  honda  y  recojida, 
bien  untada  de  manteca,  sobre  ella  se  acomoda  el  pollo,  y 
al  rededor  de  el  y  sin  que  pegue  á  la  cazuela,  se  le  irá  po- 
niendo picadillo  como  en  el  dicho  anterior,  y  al  mismo  tiem- 
po con  una  cuchara  se  le  irá  echando  huero  contra  la  ca- 
zuela, cosa  que  todo  quede  cubierto,  y  se  le  agregará  al  pi- 
cadillo aceitunas,  pasas,  almendras,  huevo  cocido  en  reba- 
nadas, alcaparrones,  chilitos,  que  con  todo  se  irá  cubriendo 
hasta  que  este*  parejo  y  tapado  el  pollo,  y  luego  se  acabará 
de  cubrir  con  mas  huevo  batido,  cosa  que  se  una  con  el  del 
rededor;  se  pondrá  en  rescoldo,  y  con  fuego  suave  arriba 
para  que  cuaje  y  se  dore;  así  que  esté  se  aparta  y  se  le  echa 
por  encima  azúcar  molida. 

941.  Otro  de  gallillo* — Ya  cocida  la  gallina  se  hará  peda- 
zos chicos,  junto  oon  trocitos  de  lomo  de  cerdo,  longaniza, 
choricitos  partidos,  todo  cocido  con  la  gallina;  se  freirá  en 
manteca,  cebolla,  ajos,  jitomates  y  chiles  verdes,  todo  pica- 
do, y  cuando  esté"  rendido  se  sazona  con  sal,  azafrán,  clavos 
y  pimienta,  perejil  picado,  y  allí  se  echará  la  gallina  coc 


285 

todo  lo  demás,  se  le  agregará  un  poquito  de  vino  carlon  y* 
caldo  de  ella;  hervirá  hasta  que  seque,  sin  que  se  queme,  so 
aparta,  se  deja  enfriar,  y  cuando  ya  esté,  se  incorpora  con 
suficiente  huevo  batido,  y  en  una  cazuela  embarrada  de  man- 
teca se  echa  un  poco  de  huevo  batido,  se  acomoda  una  ca- 
pa de  rebanadas  de  pan  doradas  en  comal,  y  rociado*  con 
vino,  se  le  pondrá  encima  otra  de  la  gallina  con  todo  lo  de- 
más, agregándole  pasas,  almendras,  alcaparras,  huevo  co- 
cido, aceitunas,  tornachiles  y  se  pondrá  otra  de  pan  y  hue- 
vo al  rededor,  y  asi  se  irán  poniendo  hasta  concluir,  siendo 
la  última  de  pan,  y  rociado  con  el  vino,  se  cubrirá  con  mas 
huevo,  y  se  concluirá  como  el  anterior. 

94'¿.  Otra  de  pollos  escondido*. — Hecho  un  picadillo,  so 
untará  una  cazuela  con  manteca,  se  pondrá  en  ella  una  ho- 
ja, no  muy  delgada  de  masa  hecha  como  la  de  los  rabióles, 
agregándole  vino,  azúcar,  y  que  asta  salga  de  la  tortera,  y 
sobre  ella  se  acomodará  la  mitad  del  picadillo  y  todo  lo  que 
á  los  anteriores;  sobre  este  irán  los  pollos  ya  cocidos  y  en 
cuartos,  envueltos  en  harina  y  fritos,  cogollos  de  alcacho- 
fas y  coliflores  cocidas,  y  se  les  pondrán  los  mismos  ador- 
nos que  lleva  abajo,  en  seguida  4a  otra  mitad  del  picadillo, 
y  sobre  él  otra  hoja  de  la  masa  dicha;  se  juntarán  las  dos 
haciendo  el  repulgo  hacia  arriba,  se  le  pondrán  algunas  co- 
sitas do  adorno  de  la  misma  masa;  se  unta  bien  de  manteca, 
se  mete  al  horno  cuidando  no  se  queme,  y  cuando  se  conoz- 
ca que  están  cocidas  las  hojas  de  la  masa,  se  aparta  y  antes 
que  se  enfrie,  se  le  echa  por  encima  azúcar  mezclada  con 
canela  en  polvo. 

943.  Torta  para  pollo,  pescado  ó  tortitas  de  camarón.  — Co- 
cido el  arroz  con  sal  que  quede  entero  y  bien  seco,  así  que 


286 

esté*  frito  se  incorpora  con  suficientes  hueros  batidos,  y  en 
una  cazuela  untada  oon  bastante  manteca,  ae  echará  la  mi 
tad  del  anos,  y  encima  te  le  pondrá  una  capa  de  recaudo 
frito  en  manteca,  que  será  de  cebollas,  ajee,  jitomates  y  chi 
lea  verdea,  todo  picado  menudo  y  sazonado,  con  sal,  azafrán 
clavos,  pimienta  molida,  y  encima  de  este  recaudo  se  acó 
moderan  loa  cuartos  de  pollo,  que  si  son  muy  chiquitos  se 
rá  en  crudo,  y  si  fueren  mas  grandes  serán  cocidos,  6  trozos 
de  pescado  ya  cocido,  ó  tortitas  de  camarón  6  hueva,  agre 
gándole  pasas,  almendras,  alcaparras,  alcaparrones,  aceitu 
ñas,  tornachiles  en  cuartos;  estando  todo  bien  acomodado 
se  le  echará  el  otro  recaudo,  y  ya  que  este*  emparejado,  se 
guirá  la  otra  capa  de  arroz  que  quedó,  y  encima  de  él  des 
pue+;  de  parejo,  será  otra  de  huevo  batido,  se  le  untará  man 
teca  y  se  pondrá  á  dos  fuegos,  y  cuando  esté*  cuajada  y  do 
rada  se  le  echa  azúcar. 

Otra  se  hace  lo  mismo:  pero  lleva  el  arroz,  azúcar  y  cañe* 
la,  antes  de  hacer  la  torta. 

944.  Otro  de  pichones.  — Se  hace  también  como  la  anterior» 
con  la  diferencia  de  llevar  en  lugar  de  pollos,  pichones;  y 
encima  del  huevo  luego  que  haya  cuajado,  se  unta  de  man* 
toquilla  y  se  le  echa  otra  capa  de  bizcocho  molido  con  azú- 
car y  se  le  vuelve  á  poner  lumbre  para  que  se  dore,  echan* 
dolé  mas  mantequilla  por  encima. 

946.  Torta  de  carne.— Kn  un  picadillo  hecho  como  en  las 
anteriores,  se  le  agregan  trocitos  de  longaniza,  salchicha, 
jamón,  choricitos,  aceitunas,  pasas,  almendras  enteras,  bas* 
tante  canela  en  polvo,  se  incorpora  todo  con  huevos  batidos, 
su6dentes  á  cuajar  la  torta,  y  en  una  cazuela  untada  de 
manteca  se  vaciará  todo  y  se  empareja;  se  le  echa  encima 


287 

mas  huevo,  y  untado  de  manteca  ie  pondrá  á  dos  fuegos 
suaves,  se  cuidará  que  no  se  queme,  y  ya  que  está  cuajada 
se  aparta  y  echará  asacar  molida. 

946.  Otra, — Dispuesto  el  picadillo  hecho  como  se  ha  di- 
cho, pero  que  sea  de  carnero  y  carne  de  cerdo,  se  le  mez- 
clarán suficientes  huevos  batidos,  y  en  una  cazuela  untada 
de  manteca  se  pondrá  una  capa  de  este  picadillo,  y  otra  de 
pedazos  de  lengua  y  píes  de  cerdo,  tiras  de  jamón,  rebana- 
das de  chorizo,  trooitos  de  longaniza,  de  salchicha,  de  hue- 
vo y  de  coliflor,  todo  cocido;  alcaparras,  almendras,  pasas, 
chilitos  y  aceitunas  y  asi  se  irán  poniendo  capas  siendo  la 
última  de  huevo,  y  cuando  haya  cuajado  se  aparta  y  se  le 
echa  encima  azúcar  molida. 

947.  Totta  de  jigote.--  Ya  dispuesto  un  picadillo  como  los 
anteriores,  se  agregarán  lenguas  de  carnero,  madrecillas  de 
gallina,  mollejas,  hígados  picados,  rebanadas  de  chorizon  y 
butifarra,  trocitos  de  salchicha,  longaniza,  tiras  de  jamón, 
huevos  enteros  (de  huevera)  todo  cocido,  orégano  y  un  po- 
co de  caldo  para  que  hierva  un  rato  y  se  sazone;  pasas,  al- 
mendras y  aceitunas,  y  ouando  está  seco  y  frito  se  le  incor- 
poran huevos  batidos,  y  en  una  cazuela  bien  untada  de  man' 
teca  se  echará;  se  empareja  y  se  cubre  de  mas  huevo  enci- 
ma, se  unta  de  manteca  y  se  pone  á  dos  fuegos,  asi  que  este* 
cuajada  se  le  es|>olvorea  azúcar  molida. 

948.  Torta  de  revoltillo» — Se  freirá  en  manteca  cebolla,  ajo, 
jitomates  y  chile  verde  gordo,  todo  picado  y  ya  reunido  y 
con  sal  se  le  agrega  huevos,  se  mezclan,  y  cuando  están 
cuajados  se  unta  una  cazuela  con  manteca;  se  pondrá  un» 
capa  de  hueros  batidos,  otra  de  pan  tostado  en  manteca, 
otra  de  loa  huevos  revueltos,  agregándole  trocitos  de  jamón, 


288 

longaniza,  chorizos,  huero,  todo  cocido;  alcaparral,  aceita* 
ñas,  pasas,  almendras,  perejil  picado,  pichones  cocidos  y 
en  cuartos,  otra  de  rebanadas  de  pan,  y  así  irán  poniéndose 
hasta  concluir,  entre  una  y  otra  huevo  batido  y  polvo  de 
pimienta,  la  última  será  del  huevo  batido;  se  pondrá  á  dos 
fuegos  suaves  y  cuando  esté*  se  le  echará  asacar. 

940.  Otra  de  pies  de  cerdo. — Cocidos,  deshuesados  y  he- 
chos pedasos  chicos,  so  mezclarán  con  almendras  molidas, 
yemas  batidas,  y  en  una  cazuela  untada  de  manteca  se  echa 
y  sobre  ello  mas  yemas  mezcladas  con  azúcar  y  ajonjolí  por 
encima;  se  pondrá  á  dos  fuegos,  cuidando  que  no  se  queme, 
y  cuando  esté*  so  aparta  y  se  le  agrega  canela  en  polvo. 

950.  Otro  de  camaronee. —Limpios  de  cabeza,  pies  y  cola, 
remojados,  cocidos  y  quitado  todo  pellejo,  se  dispondrá  en 
todo  como  la  anterior,  con  la  diferencia  de  llevar  bastante 
pan  rallado,  y  que  si  fueren  de  los  muy  grandes  se  partan 
por  la  mitad,  y  que  en  lugar  de  agua  sea  de  la  en  que  se 
cocieron. 

95  L  Otra  con  pescado  ó  camarón. — Se  freirá  en  mante- 
ca cebolla,  ajos,  jitomates  y  chiles  verdes  picados  menu- 
do, y  así  que  ette*  se  echará  azafrán,  clavo,  cominos,  pi- 
mienta molida,  perejil  picado,  el  pescado  6  camarón,  una 
poca  de  la  agua  en  que  se  haya  cocido,  pasas,  almendras, 
aceite,  vinagre,  y  cuando  este*  bien  sazonado  y  seco  se  apar- 
tará, y  con  huevo  suficiente  para  cuajar  y  azúcar  se  incor- 
pora, y  en  una  cazuela  untada  de  manteca  se  pondrá  una  ca- 
pa delgada  del  arroz,  y  otra  del  pescado  6  camarones;  agre- 
gándole trocitos  de  pera,  durazno,  membrillo,  manzana  y 
rebanadas  de  calabacitas,  todo  cocido,  y  así  se  irán  ponien- 


289 

do  capa»,  la  última  da  arroz,  y  echándole  encima  mai  hue- 
vo batido,  ae  acabará  de  hacer  como  las  anteriores. 

Otra  ae  hace  lo  mismo  con  el  arros  bien  teñido  de  aza- 
frán, y  no  lleva  azúcar  como  la  anterior. 

052.  Otra  de  camarón. — Se  echan  á  remojar  en  agua  ca- 
liente, se  limpian  y  se  muelen  en  seco  con  un  pedazo  de 
pan  tostado,  se  bate  el  huevo  y  se  hace  la  torta,  se  le  echa 
una  rociada  de  agua  cuando  se  está  revolviendo;  se  tuesta 
el  chile  mulato;  con  unos  tomates  cocidos,  se  muele  todo  y 
se  frie,  ya  que  está  hirviendo  se  le  echa  la  torta  y  papas 
cocidas  y  picadas. 

953.  Torta  de  sardina. — Se  pica  un  poco  de  jitomate  de 
los  mas  maduros,  sin  pepita,  una  cebolla  también  muy  me- 
nudita,  perejil  del  mismo  modo  y  se  frie  en  manteca;  se 
les  quitan  á  las  sardinas  las  espinas  y  el  pellejo  y  se  par- 
ten en  pedazos,  echándolos  en  el  jitomate  junto  con  un 
polvo  de  pimienta  y  unas  alcaparras;  se  baten  unos  huevos 
como,  para  freir,  se  h  echa  este  picadillo  y  se  revuelve  á 
que  incorpore;  se  echa  manteca  en  una  sartén  y  en  ella  se 
frie  la  torta  volteándola  de  ambos  lados.  Se  adorna  con 
lechugas  y  rebanadas  de  cebolla  ya  que  está  en  los  platos. 

954.  Torta  de  verduras. — Se  cocerán  con  chorizon  en  agua 
con  sal,  ejotes,  salsi6es  y  zanahorias  picadas,  habas  ver- 
des tiernecitas  y  chícharos;  y  cuando  este*  se  escurrirá  todo, 
y  ya  seco  se  le  agrega  el  chorizon  desmoronado,  chayotas, 
papas  cocidas  y  peladas,  y  en  trocitos  chicos,  calabacitas  ya 
guisadas  con  manteca,  cebolla,  jitomates,  ajos,  perejil  pica- 
do y  que  sean  una  tercera  parte  de  lo  demás  y  secas,  y  en 
huevos  batidos  y  suficientes  á  cuajar,  se  echará  todo  esto, 

la  ooonnou  poblana. — tom. — x.  19. 


390 

se  incorpora  bien,  y  en  un*  cazuela  untada  do  mán^m  te 
concluirá  oomo  las  anteriores. 

956.  Otra  de  calabacitas. — Picadas  las  calabacitas  y  gui- 
sadas, hasta  estar  cocidas  y  que  queden  secas,  se  enfrian  y 
se  les  mezcla  bastante  canela  en  polvo,  y  suficientes  huevos 
batidos,  y  en  una?cazuela  untada  de  manteca  se  pondrá  una 
capa  de  pan  tostado  en  comal  y  molido,  otra  de  calabacitas 
y  la  ultima  será  de  pan;  se  le  agrega  bastante  mantequilla, 
se  pondrá  á  dos  fuegos  suaves,  y  cuando  haya  cuajado  y  do- 
rado, se  aparta  y  se  le  echa  asáoar  y  canela» 

966.  Torta  de  col — Después  de  cocida  la  col  blanca,  se 
pica  y  se  freirá  on  manteca,  cebolla,  ajos  y  jitomates  tam- 
bién picados,  y  ya  que  está  se  echará  la  col  á  que  se  medio 
fria,  y  se  le  agrega  azúcar  molida  á  que  le  salga  el  dulce, 
bastante  queso  grande  rallado,  6  fresco  molido,  y  cuantío 
está  mezclado  se  dejará  enfriar,  se  le  echarán  huevos  bati- 
dos suficientes,  y  ya  bien  incorporado  todo,  se  vaciará  en 
una  cazuela  untada  de  manteca,  se  le  agrega  mas  huevo  en- 
cima y  se  pone  á  dos  fuegos,  y  así  que  está  cuajado  se  le 
expolvarea  azúcar  molida. 

957.  Otra  de  verdolaga*, — Guisadas  las  verdolagas  algo 
secas;  y  con  chorizon,  jamón  y  longaniza  cocida  y  en  trocí- 
tos,  se  hará  una  masa  de  garbanzos  pelados,  cocidos,  y  ye- 
mas también  cocidas;  y  molido  todo  esto  se  incorpora  con 
azúcar,  canela  y  clavo  al  gusto,  y  en  una  cazuela  untada  de 
mantequilla  se  pondrá  una  capa  de  masa,  otra  de  las  ver- 
dolagas, y  la  última  será  de  la  masa,  la  que  se  untará  bien 
de  mantequilla,  y  puesta  á  dos  fuegos  se  cuaja,  y  después 
de  dorada  se  le  echa  azúcar  y  canela.  Otra  se  hace  con  una 
capa  de  huevo  batido,  otra  de  la  masa,  y  otra  de  las  verdo- 


291 

Ligas,  la  ultima  será  del  huevo  para  que  junte  por  los  la- 
dos, y  así  que  esté*  cuajada  se  le  echa  azúcar  molida. 

968.  Torta  de  papas. — Se  ponen  á  cocer  las  papas,  se  pe- 
lan, se  marta  jan  y  se  muele  queso  añejo,  se  bate  el  huevo 
y  se  echa  la  papa,  se  pone  la  sartén  con  manteca  y  se  hace 
la  torta,  se  parten  cuarterones  y  se  come  seca  con  salsa  ó* 
con  ensalada  ó*  en  mole;  se  tuesta  chile  mulato,  se  ponen  á 
cocer  unos  tomates,  so  muelen  y  se  fríen,  se  echa  agua  y 
sal  y  ya  que  está  hirviendo  se  echa  la  torta  á  que  quede  ea- 
pesito. 

959.  Torta  de  papas, — Se  preparan  las  papas  como  para 
las  frituras  con  huevo  y  todo;  se  unta  una  cacerola  de  man- 
tequilla, se  le  echa  pan  molido  y  se  le  pone  un  papel  en  el 
fondo  para  que  no  se  queme,  se  pone  allí  la  papa  á  cocer  á 
dos  fuegos  muy  suaves,  si  se  quiere  se  le  puede  agregar  un 
poco  de  queso  fresco  amasado,  y  si  no,  sola. 

900.  Torta  aV  papas  fritas.  — Fríanse  papas  en  ruedas  del- 
gadas, bátanse  bien  los  huevos  y  viértanse  por  encima  aña- 
diendo un  poco  de  sal;  téngase  cuidado  de  volver  esta  tor- 
ta, procurando  que  no  se  queme. 

961.  Torta  de  perejil. — Se  hacen  tortas  delgadas,  de  tres 
huevos  cada  una,  se  sazona  con  perejil,  sal  y  pimienta;  al 

*  hacerlas  se  van  extendiendo  sobre  la  cobertera  de  una  ca- 
cerola, se  enrollan  muy  apretadas,  y  luego  se  cortan  cada 
una  en  dos  partes,  se  rebozan  con  huevo  muy  batido  y  se 
empanan  con  miga  de  pan  rallado  muy  menuda,  se  fríen 
hasta  que  tengan  buen  color  en  una  sartén  con  manteca 
fresca,  y  se  sirve  guarnecida  de  perejil. 

962.  Torta  de  cebolla. — Se  pica  cebolla  en  pedazos  peque- 
ftitos  y  «e  fríe  en  aceite;  cuando  está  frita  se  echan  los  hue- 


▼ot  bien  batidos  y  un  poco  de  tal  6  asacar,  cuidando  de 
que  quede  bien  dorada. 

969.  Torta  de  Mcharoe* — Se  limpian  y  se  ponen  á  cocer 
loe  chícharos,  se  martajan  con  queso  anejo:  se  bate  el  hue- 
vo y  allí  se  echan  los  chícharos:  se  hace  la  torta  y  se  come 
con  salsa. 

964.  Otra  de  calabacita*. — Se  ponen  á  cocer  y  ya  que  es* 
Un/ se  pican ,  se  les  echa  queso  fresco,  se  bate  el  huevo  y 
se  echan  las  calabacitas. 

966.  Torta  de  wanahoriae. — Se  pone  á  cocer  la  zanaho- 
ria, se  parte  y  se  le  saca  el  corazón;  ya  que  está  cocida  se 
exprime  y  se  marta  ja  en  el  metate  seco;  se  muele  queso  añe- 
jo, se  bate  el  huevo  y  se  echa  la  zanahoria  en  el  huevo,  se 
pone  la  sartén" con  manteca,  se  hacen  con  una  cuchara  tor- 
titas y  se  echan  en  la  sartén,  se  come  con  salsa  de  chilpotle. 

966.  Otra  torio, — Se  hace  picadillo  con  todo  recaudo,  se 
martaja  bizcocho,  se  bate  huevo  y  se  revuelve  con  bizcocho, 
se^pone  una  capa  de  huevo  y  otra  de  picadillo,  se  le  ponen 
chorizos,  se  rocían  con  vino  y  se  pone  á  dos  fuegos.  La  sal- 
sa se  hace  así:  se  muelen  jitomates,  un  pedacito  de  pan  y 
se  frie  con  ajos,  se  le  echa  almendras,  aceitunas  y  pases,  y 
en  polvo  clavo  y  canela. 

967.  Torta  cuajada.— Pié*,  lomo,  lengua,  todo  de  puer- 
co, jamón,  chorizos,  lo  cual  después  de  cocido  se  pica  en 
pedacitos,  betabel,  coliflor,  garbanzos,  jitomates,  ajos  fri- 
tos, azafrán,  pimienta,  clavo,  canela,  pan  rallado;  partidos 
los  hueros  se  revuelve  todo,  llevando  dentro  chiles,  aceitu- 
nas, almendras,  piñones,  alcaparras  y  todo  puesto  á  dos  fue- 
gos; así  que  está  ouajada,  su  chuchóte. 

968.  Torta  al  natwraL — Rómpanse  en  una  cacerola  loe 


293 

huevos  que  se  juaguen  necesarios,  sazónense  con  1»  sal  fina 
y  añádase  un  poco  de  agua  ó  de  leche,  y  bátase  iodo  junto. 
Cuanto  mas  batidos  están  tanto  mas  ligera  será  la  torta* 
derrítase  manteca  en  una  sartén,  sin  que  se  caliente;  viér- 
tanse en  ella  los  huevos,  batiéndolos  siempre,  y  póngase  al 
fuego,  sacudiendo  fuertemente  y  á  menndo  la  sartén  para 
despegarlos.  Cuando  estén  cuajados  y  con  buen  color  se 
echará  debajo  un  poco  de  manteca.  Vuélvase  la  torta  si  se 
cree  necesario  ó  dóblese  por  medio,  poniéndola  en  el  pla- 
tón; (le  este  modo  estará  menos  seca  y  por  consiguiente  mas 
delicada. 

969.  Torta  d  la  francesa. — Se  mezclan  y  baten  unos  hue- 
vos frescos,  se  les  añade  algo  de  leche  para  suavizarlos,  se 
agregan  perejil  ú  otras  yerbas  finas;  se  expolvorea  todo  con 
sal,  y  se  vierten  los  huevos  así  preparados  de  gol  de  en  una 
sartén  que  contenga  un  poco  de  manteca  bien  caliente. 
Apenas  cuaja,  se  coje  la  sartén  por  el  mango,  te  da  un  im- 
pulso horizontal  de  frente  extendiendo  el  brazo,  y  al  reco- 
cerlo otro  impulso  hacia  arriba;  se  dobla  merced  á  este  mo- 
vimiento la  tierna  masa  en  forma  de  media  luna,  se  corri- 
jen  con  una  cuchara  las  imperfecciones  de  los  perfiles;  se 
da  otra  vuelta,  se  saca  y  se  sirve  dorada  y  humeante  sobre 
un  plato  que  apenas  debe  humedecerse  con  alguna  que  otra 
gota  de  grasa  clara  y  trasparente  como  el  jugo  de  una  na- 
ranja. 

970.  Torta  de  yerba*  finas. — Se  añaden  yerbas  finas  bien 
picadas  al  sazonamiento  de  una  torta  natural;  lo  demás  es 
enteramente  igual  á  lo  indicado  en  el  anterior  artículo. 

971.  Torta  de  riñon  de  ternera. — Piqúese  bien  menudo 
un  riñon  de  ternera  asado  antes  en  asador,  échese  en  los 


294 

huevos  preparados  pera  una  torta  al  natural,  bátase  todo 
junto  y  hágase  la  torta. 

972.  Dt  otro  modo. — Córtese  en  pedacitos  cuadrados  ó 
en  rebanadas  delgadas  un  riñon  igualmente  asado,  póngase 
en  una  cacerola  con  un  poco  de  salsa  española  y  expóngase 
al  fuego,  añadiendo  jugo  ó  caldo  de  sustancias,  sal,  perejil, 
pimienta  y  cebolla  picadas.  Cuando  haya  cocido  algún  tiem- 
po se  hace  una  torta  al  natural,  y  antes  de  servirla  se  echa 
dicho  guiso  en  medio. 

973.  Ton  ta  de  tocino.  — Se  corta  en  pedacitos  cuadrados  un 
trozo  de  jamón  desalado  y  quitada  la  corteza;  hágase  tomar 
color  en  la  sartén  con  un  poco  de  manteca  y  échense  los  hue- 
vos bien  batidos  y  sazonados;  se  acaba  y  sirve  como  la  torta 
al  natural. 

974  Torta  franoua. — Lengua,  pies  de  puerco,  jamón  y 
lomo,  todo  bien  cocido  y  picado,  se  hace  picadillo  de  jito- 
mate, se  echa  allí  la  carne  con  pasas,  almendras,  piñones  y 
poco  de  dulce;  se  baten  unos  huevos  y  se  revuelve  todo  co- 
ciéndolo á  dos  fuegos  en  una  sartén  untada  de  manteca. 

975.  Torta  dt  arroz. — Se  cuece  una  taza  de  arroz  entero 
en  agua  y  un  pedazo  de  azúcar;  ya  que  esta  cocido  se  pone 
á  enfriar  y  se  hace  el  picadillo  frito  en  manteca  con  jitoma- 
tes, pasas  partidas,  almendras,  alcaparras,  acitrón  y  una  pun- 
tita  de  vinagre;  ya  que  está  todo  se  baten  cuatro  huevos, 
primero  las  claras,  y  así  que  estén  muy  bien  batidas  se  les 
mezclan  las  yemas  y  se  baten;  ya  qne  está  se  mezcla  el  arroz 
dejando  separado  un  poco  de  huevo  batido,  se  embarra  muy 
bien  de  manteca  una  cacerola  y  se  pone  la  mitad  del  arroz 
abajo,  en  medio  el  picadillo  y  el  resto  del  arroz  encima  de 
la  carne,  se  le  echa  por  encima  el  poco  de  huevo  que  se 


295 

apartó  y  se  pone  en  una  hornilla  á  la  que  se  le  quita  toda 
la  lumbre  y  solo  se  le  deja  el  rescoldo.  No  se  llena  la  ca- 
zuela hasta  arriba  sino  que  la  torta  quede  como  un  dedo 
mas  abajo  de  la  cazuela,  ó  medio  dedo  para  que  esponje; 
encima  se  pone  un  comal  con  lumbre  fuerte  y  se  tiene  cui- 
dado de  que  quede  bien  repartida  por  todo  el  comal  para 
que  dore  pareja;  para  saber  cuando  está  buena  se  le  mete 
un  popote;  cuando  sale  limpio  ya  está  y  cuando  se  aparta  se 
le  echa  por  encima  azúcar  molida. 

976.  Otra  tarta  de  arroz. — Se  lava  muy  bien  el  arroz  y  se 
pene  al  sol  y  ya  que  está  seco  se  muele  muy  remolido  en 
polvo  con  queso  anejo;  se  bate  el  huevo  y  se  echa  allí  el 
arroz;  se  pone  la  sartén  con  manteca  y  se  echa;  ya  que  está 
cuajada  se  parten  cuarterones  y  se  hace  la  especia,  se  mue- 
leu  los  jitomates  y  se  fríen  con  ajo  y  cebolla  los  dos  picados, 
se  fríe  muy  bien  el  jitomate,  se  echa  sal  y  agua,  chilchoti- 
tos  y  ya  que  está  hirviendo  se  echa  la  torta  á  que  hierva 
un  rato  grande. 

977.  Torta  de  arroz  á  la  Morisqueta, — Remojado  y  lavado 
el  arroz  se  pone  á  cocer,  se  hace  picadillo  de  carne  de  puer- 
co con  todos  sus  adornos  como  para  chiles  rellenos,  especias, 
clavo,  canela  y  cominos,  se  cuece  el  arroz  á  que  quede  ente- 
ro, se  revuelve  con  polvo  de  azúcar,  se  embarra  la  sartén 
con  manteca,  se  le  echa  un  poco  de  huevo  y  luego  el  arroz 
que  cubra  el  fondo  de  la  sartén;  se  echa  el  picadillo,  se  es- 
trellan unos  huevos  y  encima  se  pone  todo  el  arroz  y  mas 
huevo;  encima  un  poco  de  ajonjolí  y  se  pone  á  dos  fuegos; 
para  ver  si  está  cocida  se  meto  un  popote  á  que  salga  limpio 
y  en  los  platos  se  le  echa  polvo  de  azúcar  por  encima.  La 
salsa:  cocidos  los  jitomates  y  molidos,  so  fríen  en  manteca 


396 

con  ajo  picado,  cebolla  rebanada,  jamón  rebanado,  aceitu- 
nas, chiles  en  vinagre,  pasas,  almemdras,  rebanadas  de  man- 
zana, perejil,  tantito  vinagre  y  azúcar,  procurando  que  no 
quede  muy  suelta. 

978.  Otra  de  arro*. — Cocido  el  arroz  con  sal,  así  que  esté* , 
quedará  espeso,  y  cuando  se  enfrie,  se  le  mezclarán  olavos, 
pimienta,  cominos,  azafrán  molido  y  cebolla,  ajos,  jitomates 
y  chile  verde,  todo  picado  muy  menudo  y  frito  en  manteca 
con  sal,  pasas,  almendras,  aceitunas,  alcaparras,  rebanadas 
de  chorizon,  trocitos  de  jamón  y  lomo  de  cerdo  ya  cocido, 
y  huevos  batidos;  incorporado  todo  se  vaciará  en  una  cazue- 
la bien  untada  de  manteca,  se  meterá  al  horno  6  se  pondrá 
á  dos  fuegos  suaves,  y  euando  esté  cuajada  se  aparta  y  se  le 
echa  azúcar. 

979.  Torta  de  arrot  con  camarones. — Limpios  y  cocidos  los 
camarones  se  apartarán,  y  en  la  agua  en  que  se  cocieron,  6 
con  alguna  poca  mas,  si  fuere  necesario,  se  cocerá  el  arroz 
con  sal,  y  ya  cocido  y  frío  se  le  incorpora  el  huevo  batido, 
los  camarones  y  un  poco  de  recaudo  frito  y  sazonado  como 
la  anterior,  agregándole  aceitunas,  pedazos  de  chilitos  en 
vinagre,  alcaparras,  y  en  una  cazuela  untada  de  manteca  se 
vaciará  todo  y  se  concluirá  como  las  demás.  También  se 
hace  con  el  camarón  en  polvo  mezclado  en  el  arroz,  después 
de  oocido  en  agua. 

980.  Torta  guisada. — Todas  las  tortas  pueden  guisarse, 
exceptuando  las  que  se  hagan  con  dulce;  para  guisarlas  se 
cortan  en  pedazos  pequeños  entre  largos,  se  ponen  en  una 
cazuela  con  agua,  sal,  ajo,  perejil  y  pimienta,  espesando  el 
caldo  con  una  miga  de  pan  machacada  en  el  metate  y  des- 
leída en  caldo  y  un  poco  de  vinagre. 


297 

981.  Otra  de  sesos.  —Se  cuecen  los  «esos  de  carnero,  se  pi- 
can, se  lea  quita  el  pellejito,  se  les  pica  cebolla,  se  bate  el 
huevo,  se  hace  la  torta  y  se  come  seca. 

982.  Otra  de  pies  y  lengua  de  cerdo. — Se  cocerán  los  pies 
y  lenguas  de  cerdo  con  sal,  tiras  de  jamón,  choricitoa,  chí- 
charos y  habas  verdes  tiernas,  y  por  separado  se  cortan  be- 
tabeles, zanahorias,  coliflor  y  sesos;  en  manteca  quemada  so 
freirá  cebolla  picada,  jitomates  asados  y  ajos  molidos,  así 
que  esté  frito  se  echarán  los  pida  deshuesados  y  en  trocitos, 
y  las  lenguas  quitado  el  cuero  y  en  rebanadas,  el  jamón  en 
tiras,  los  choricitos  partidos,  las  habas,  el  betabel,  zanaho- 
ria, coliflor  y  sesos,  todo  en  trozos  chicos,  clavo,  pimienta, 
azafrán  y  cominos  molidos,  alcaparras,  aceitunas  y  un  poco 
de  caldo,  para  que  todo  esto  hierva;  y  ya  sazonado  y  seco, 
se  le  mezclarán  huevos  batidos,  y  en  una  cazuela  6  sartén 
bien  untada  de  manteca,  se  vacia  para  ponerla  á  dos  fuegos 
suaves,  y  así  que  este'  cuajada  y  desprendida  de  la  sartén  se 
pondrá  en  un  plato  y  se  echará  azúcar  molida. 

983.  Torta  de  jamón* — Se  toma  mas  magro  que  gordo,  lo 
que  fuere  suficiente  para  una  cazuela  de  á  cuartilla,  y  coci- 
do se  muelen  siete  huevos  enteros  y  siete  yemas;  se  le  echa 
almíbar,  poca  canela  con  manteca  y  el  ojaldrado  de  harina 
para  hacer  el  suelo. 

984.  ídem  escondida  de  puerco. — Se  cuece  lomo  y  jamón 
y  se  rebana  todo,  se  fríe  jitomate,  especias  molidas,  pasas, 
almendras,  ajonjolí,  nuez,  acitrón,  vino,  perejil,  huevos 
duros  en  rebanadas;  se  baten  huevos  como  para  freir  los  que 
sean  necesarios,  se  revuelve  todo  y  se  pone  á  dos  fuegos. 

985.  Torta  de  ave. — Cualquiera  especie  de  ave  que  se  em- 
plee debe  partirse  en  dos  pedazos  6  mas,  escaldarla  y  reho- 


298 

garla  en  mantequilla  con  aal,  pimienta,  especias,  yerbas  fi- 
nas y  un  manojo  de  perejil;  se  coloca  sobre  el  suelo  de  la 
torta. 
Los  menudillos  do  ave  se  preparan  lo  mismo. 

986.  Torta  de  casta. — A  la  liebre  se  le  quitan  los  huesos, 
al  conejo  soló  se  le  quebrantan;  el  uno  y  el  otro  se  cortan 
por  miembros. 

Las  tórtolas  y  demás  volátiles  medianos  se  parten  en  cua- 
tro pedazos;  se  incorporan  á  la  molleja  6  al  relleno  los  in- 
testinos después  de  bien  limpios. 

A  las  tórtolas  solo  se  les  quitan  las  patas,  y  se  incorpora 
también  al  relleno  6  molleja  lo  que  se  les  ha  sacado  del 
vientre. 

987.  Torta  al  natural — Se  baten  unos  huevos,  según 
el  tamaño  de  la  torta,  y  se  les  añade  media  6  una  cucha- 
rada de  agua  fresca,  lo  que  facilita  extraordinariamente  la 
mezcla  íntima  de  las  claras  y  las  yemas.  Se  sazona  con  sal 
fina  mezclada  con  un  poco  de  pimienta»  Se  derrite  en  una 
snrten  mantequilla  fresca,  se  vierten  en  ella  los  huevos  ba- 
tidos y  se  menean  hasta  que  la  tortilla  empiese  á  cuajarse. 
Guando  esto  cuajada  se  levanta  con  la  punta  de  un  cuchillo 
y  se  pone  debajo  otra  cantidad  de  mantequilla  fresca.  Tan 
pronto  oomo  ésta  se  haya  derretido,  se  vuelve  la  tortilla  re- 
plegándola sobre  sí  misma,  lo  que  se  hace  fácilmente,  se 
deja  uno  6  dos  minutos  en  la  sartén  y  se  pone  en  el  platón 
para  servirla  en  el  acto. 

Puede  variarse  hasta  el  infinito  el  sabor  de  la  torta  al 
natural,  añadiendo  á  los  huevos,  en  el  momento  de  batirlos, 
queso  rallado,  yerbas  finas  picadas,  acederas  cocidas,  salsa 


299 

6  jugo  de  carne,  el  procedimiento  no  varía  en  ninguno  de 
estos  casos. 

FRITURAS. 

988.  Frituras  de  sesos. — Se  ponen  en  una  cazuela  dos  se- 
sos cocidos,  se  les  incorpora  un  huevo  nada  mas  partido, 
una  cucharada  de  harina,  otra  de  perejil  muy  picado,  dos 
de  cebolla  menudita,  bastante  pimienta  en  polvo,  un  peda- 
cito  de  pan  rallado,  un  poco  de  aoeite  de  comer,  sal  al  gusto; 
se  mezcla  todo  perfectamente  y  se  van  poniendo  en  una  cu- 
chara á  que  se  hagan  tortillas  que  se  fríen  en  la  manteca. 

989.  Fritura  de  papas. — Después  de  peladas  las  papas  se 
ponen  á  cocer  con  sal;  en  guisado  se  muelen  con  un  pedazo 
de  migajon  de  pan  remojado.  Se  pono  esta  pasta  en  una  ca- 
cerola con  un  polvo  de  pimienta,  perejil  muy  menudito,  una 
poca  de  mantequilla  y  se  le  van  revolviendo  unos  huevos  con 
todo  y  clara  á  que  se  puedan  formar  bolitas,  las  que  se  van 
friendo  en  manteca.  Estas  so  sirven  así  6  con  el  caldillo  si- 
guiente: se  ponen  á  cocer  unos  huevos  y  se  baten  las  yemas 
con  un  pedacito  de  pan  remojado.  Se  fríe  cebolla  y  ajo  muy 
picado,  allí  se  echan  las  yemas  cocidas  y  caldo  de  la  olla, 
antes  de  que  tenga  chile  y  perejil,  se  le  pone  la  sal  suficien- 
te y  se  tiene  esta  salsa  bien  caliente;  á  la  hora  de  comer  se 
acomodan  las  bolitas  en  un  platón  y  se  bañan  con  la  salsa. 

990.  Otra  fritura  de  papas. — La  papa  cocida  se  deshace 
con  la  mano,  revolviéndole  bastanto  queso  añejo  y  mezclán- 
dole sal  suficiente.  Se  forman  bolitas  que  se  revuelcan  en 
huevo  y  luego  en  harina,  dorándola  en  manteca  bien  ca- 
liento. 


300 

991.  Otra  de  sesos  y  pechuga  de  gaÜina. — Fara  un  real  de 
sesos  se  emplea  una  pechuga  y  una»  pocas  de  espinacas,  to- 
do cocido  y  menudamente  picado,  se  fríen  primeramente 
espinacas,  después  los  sesos  y  luego  la  gallina:  frito  todo  y 
mesolado  con  sal  se  deja  enfriar  un  poco  para  que  puedan 
formarse  las  figuras  que  se  quieran. 

992.  Fritura  de  sesos. — Estos  se  ponen  á  cocer,  se  pican 
muy  menuditos  y  se  fríen  en  manteca:  pero  antes  se  fríe  ce- 
bolla, ajo  y  perejil,  todo  muy  picado  y  después  se  echan  loa 
sesos;  aparte  se  dora  una  poca  de  harina,  cebolla,  ajo  y  jito- 
mate picado,  perejil  y  un  poquito  de  vinagre,  especias  finas 
molidas'  y  un  poco  de  tomate  de  cascara  molida  Se  rebana 
pan  delgadito,  se  cubren  las  rebanadas  con  los  sesos  y  se  po- 
nen á  feeir;  ya  que  está  para  ir  á  la  mesa  se  ponen  las  reba- 
nadas en  el  platón  y  se  cubren  con  el  refrito. 

993.  Fritura, — Se  cojen  los  sesos  de  carnero,  dos  huevos 
duros;  se  cuecen  los  sesos  con  sal,  se  despedazan,  y  limpios 
se  tienen  los  huevos  duros  picados,  se  fríe  cebolla  y  en  ella 
se  echa  todo  lo  picado,  se  fríe  un  poco,  se  hacen  las  bolas 
de  la  hechura  que  se  quiere,  se  empanan  y  se  fríen. 

994.  Otro.— Se  pone  á  hervir  una  tasa  de  leche  con  una 
cucharada  de  mantequilla,  luego  que  suelta  el  hervor  se  le 
echa  una  taza  igual  de  harina  poco  á  poco  y  meneándola  sin 
cesar  para  que  no  se  haga  bolas.  Así  qne  despega  bien  del 
cazo  se  aparta,  y  cuando  está  frío  se  le  van  mezclando  cua- 
tro huevos,  uno  por  uno,  batiendo  con  una  cuchara  hasta 
que  hace  ojos  y  se  va  echando  en  la  manteca  con  una  cu- 
chara, rodándolos  calientes  con  azúcar  molida. 

995.  Fritura  de  saos  y  papas. — Se  ponen  á  cocer  papas 
muy  bien  peladas  y  en  muy  poca  agua  con  sal,  tapada  la  olla. 


301 

Ya  que  están  cocidas  se  escurre  bien  el  agua  y  se  baten  en 
una  cazuela  con  un  molinillo.  Se  les  pone  huevo  batido  en 
proporción ,  y  se  bate  todo  junto  para  que  se  mezcle  bien. 
Se  tienen  ya  cocidos  unos  sesos  muy  bien  despellejados  y 
picados  con  un  cuchillo;  que  tongan  sal  y  pimienta.  Se  pone 
una  sartén  con  bastante  manteca,  y  ya  bien  quemada  se  la 
deja  enfriar,  y  se  la  pone  de  nuevo  en  una  lumbre  muy  sua- 
ve; con  una  cuchara  se  pone  la  papa,  se  le  hace  un  agujero 
en  medio  y  se  le  mete  una  bolita  de  sesos,  se  tapa  y  se  van 
friendo. 

Se  hacen  otras  iguales  con  la  diferendia  de  que  los  sesos 
se  guisan  en  un  refrito  de  jitomate,  ajo,  cebolla  y  perejil. 

Otras  se  hacen  revueltos  los  sesos  con  la  papa  y  no  se  les 
echa  huevo  sino  que  se  hacen  bolitas  y  se  meten  en  el  huevo 
como  chiles  rellenos. 

HUEVOS. 

996.  Huevos  en  d  platón. — Se  cubre  de  mantequilla  el 
fondo  de  un  platón  que  pueda  suportar  la  acción  del  fuego. 
Se  le  echa  encima  uu  poco  de  sal  y  se  rompen  en  el  platón 
los  huevos  frescos,  procurando  que  queden  las  yemas  ente- 
ras. Luego  se  polvorean  con  sal  fina  mezclada  con  pimienta, 
poniendo  encima  de  cada  huevo  una  volita  de  mantequilla, 
y  el  platón  sobre  ceniza  caliente.  Sucede  á  veces  que  los 
huevos  se  cuecen  demasiado  por  debajo  y  quedan  crudos 
por  encima,  pero  este  inconveniente  se  evita  pasando  por 
encima  de  los  huevos  una  pala  enrojecida  en  el  fuego.  Es 
preciso  mantener  la  pala  i  cierta  distancia  para  que  las  ye- 


909 

mas  cuezan  sin  endurecerse.  Este  modo  de  oooar  los  hue- 
vos es.mss  elegante  que  el  ordinario. 

097.  Huevos  en  camisa. — Se  pone  á  hervir  en  un*  ca- 
zuela y  á  fuego  vivo  agua  con  un  pooo  de  sal  y  un  chorro 
de  vinagre.  Cuando  hierve  á  borbotones  se  rompen  los  hue- 
vos uno  tras  de  otro  y  se  dejan  caer  en  la  casuela,  para  que 
la  yema  caiga  envuelta  en  la  clara,  que  se  coagula  en  menos 
de  un  minuto,  si  no  deja  el  agua  de  hervir.  Guando  la  ye- 
ma e*tá  ya  solidificada  se  saca  el  huevo  con  una  espumadera» 

Se  tiene  preparada  de  antemano  una  salsa,  según  el  gusto 
de  cada  uno,  que  se  echa  muy  caliente  sobre  los  huevos  y 
se  sirven. 

998.  Huevos, — Se  cuecen  jitomates  y  se  muelen  en  el 
molcajete,  se  fríen  con  bastante  manteca  y  con  rajas  de 
chuchóte  asado;  ya  que  están  bien  fritos  se  echan  allí  los 
huevos,  revueltos  se  dejan  hacer  y  al  apartarlos  se  le  ponen 
rebanadas  de  queso  fresco. 

999.  Otros  huevos. — Se  fríe  cebolla  en  gajos  grandes  y  to- 
mate, sin  pepita  ni  pellejo;  cuando  está  cocido  el  recaudo 
se  le  echa  un  polvo  de  harina,  se  fríe  á  que  quede  blanca, 
se  muelen  unas  yemas  de  huevo  y  se  incorporan  en  lo  fri- 
to nada  mas  á  que  se  den  una  sancochada;  se  le  echa  un  po- 
co de  agua,  un  polvo  de  pimienta,  un  puño  de  perejil  muy 
menudamente  picado,  sal  al  gusto  y  estando  sazonado  y  de 
un  espeso  regular,  se  le  echan  huevos  cocidos  partidos  por 
la  mitán  y  aceite  de  comer  con  los  huevos;  ha  de  hervir  po- 
co. En  este  mismo  caldo  se  pueden  hacer  albóndigas  de 
pechuga  de  gallina  6*  de  carne  de  puerco. 

1,000.  Huevos  saltado*. — Se  amasan  yemas  de  huevo  co- 
cidos con  vinagre,  sal,  pimienta  y  aceite  que  se  echará  gota 


303 

á  gota  hasta  que  quede  ana  salsa  espesa  con  la  que  se  cu- 
bren las  claras  partidas  en  cuarterones,  adornando  el  pla- 
tón con  ramitos  de  perejil  rizado. 

1.001.  Potaje  de  huevos. — Se  cuecen  los  huevos,  se  les 
quita  el  cascaron  y  se  parten  por  la  mitad;  se  muele  un  po- 
co de  perejil  picado  y  con  yemas  de  huevo;  se  fríe  una  po- 
quita de  cebolla  picada  y  se  le  echa  agu»  con  un  polvo  de 
pimienta  y  sal  al  gusto,  se  echan  allí  los  huevos  procurando 
que  no  so  despeguen  y  ya  que  estén  sazonados  se  les  agrega 
aceite  y  se  sirven. 

1.002.  Otro  de  huevo. — Se  cuecen  lo  mismo  que  los  ante- 
riores, se  pica  jitomate  sin  pepitas,  una  poca  de  cebolla  me- 
mudita,  dos  6  tres  dientes  de  ajo,  un  poco  de  perejil  del 
mismo  modo;  se  fríe  primero  el  ajo,  luego  la  cebolla  y  al 
último  el  perejil  con  el  jitomate;  se  fríe  con  una  yema  de 
huevo  cocido  y  sal  al  gusto,  se  muelen  clavo,  canela,  pi- 
mienta y  hebras  de  azafrán;  se  le  echa  agua  y  ya  que  está 
hirviendo  se  le  ponen  los  huevos  con  tomillo  y  aceite  por 
encima  y  se  sirve. 

1.003.  Huevos  guisados. — Se  hace  un  picadillo  con  miga 
de  .pan,  perejil,  cebolla,  manteca  y  yemas  de  huevo,  con  lo 
cual  se  cubre  el  fondo  de  un  plato,  encima  se  echan  los  hue- 
vos uno  por  uno,  y  se  ponen  á  un  fuego  lento,  se  colorean 
con  una  plancha  hecha  ascua,  se  polvorean  con  un  poco  de 
sal  molida  y  un  polvo  de  pimienta  y  se  sirve.  Se  echan  en 
un  plato  cuatro  cucharadas  de  crema  ó  nata  de  leche  y  se  le 
mezcla  diez  huevos,  cuidando  que  las  yemas  no  se  revien- 
ten. Se  les  añade  un  poco  de  queso  aflojo  rallado  y  un  pol- 
vo de  pimienta,  se  cuecen  al  horno  portátil  y  se  sirven 
blandos. 


304 

1.004.  Huevos  estrellado*  con  «alto. — Se  llenan  de  agua 
las  tres  coartas  partes  de  la  cacerola  con  sf '  y  un  poco  de 
vinagre,  colocándolo  al  borde  de  la  hornilla;  se  quiebran  en 
ella  los  huevos  sin  reventarlos,  siempre  hirviendo  el  agua, 
se  dejan  cuajar,  se  retiran  con  una  cuchara  agujerada,  y  si 
tienen  alguna  consistencia  se  meten  en  agua  fría.  Se  les 
cambia  el  agua,  y  un  poco  antes  de  servirlos  se  calientan, 
se  enjugan  sobre  un  lienzo  blanco  y  se  ponen  en  un  píate, 
echando  encima  de  cada  huevo  un  polvo  de  pimienta,  una 
gota  de  vinagre  ó*  zumo  de  limón. 

1.005.  Huevos  con  jitomate*. — Se  fríe  primero  la  manteca 
ó*  aceite,  después  los  jitomates  muy  picaditos,  y  si  se  quiere, 
antes  un  poco  de  cebolla  también  picada.  Se  echan  los  hue- 
vos perfectamente  batidos  y  se  revuelven  con  el  jitomate, 
pudiendo  servirse  como  una  tortilla,  y  si  tienen  pedazos  de 
jamón,  formarán  un  buen  plato  de  almuerzo. 

1.006.  Huevos  revueltos  con  jamón. — Échese  con  los  hue- 
vos suficiente  cantidad  de  jamón  cortado  en  pedacitos  cua- 
drados, concluyase  como  los  precedentes,  y  sírvanse  rodea- 
dos de  pedacitos  de  pan  fritos. 

1.007.  Huevo»  al  raspado. — En  una  cazuela  se  ponen  ras- 
paduras de  pan  con  mantequilla,  una  anchoa,  perejil, -cebo- 
lla, un  ajo  tierno,  todo  bien  picado  y  mezclado  con  tres  ye- 
mas de  huevo;  póngase  á  fuego  lento,  estréllenselos  huevos 
encima,  ezpolvoreense  con  miga  de  pan,  sazonándolos  con 
sal  y  pimienta;  se  rodean  con  cortezas  de  pan  fritas. 

1 .008.  Huevos  rellenos. — Córtense  huevos  duros  en  dos  pe- 
dazos á  lo  largo,  machaqueóse  las  yemas  con  otro  tanto  de 
miga  de  pan  empapada  en  leche  y  exprimida,  añádase  la 
misma  cantidad  de  manteca  fresca,  cebolla  y  perejil  pica- 


305 

dos,  sal,  pimienta  y  especias  finas:  maoháquese  también  es- 
te condimento  y  ablándese  con  yemas  de  huevo  crudas,  se 
llenan  con  esto  las  claras,  y  el  resto  se  pone  en  un  plato  que 
resista  al  fuego,  formando  una  capa  como  de  un  dedo  de 
espesor;  arréglense  los  huevos  encima,  póngase  el  plato  en 
la  hornilla  y  tápese  con  un  comal  con  lumbre  para  que  to- 
men color.  ™ 

1.009.  Huevón  á  la  nieve. — Se  rompen  los  huevos,  se  se- 
paran las  claras  y  las  yemas,  se  baten  las  primeras  hasta 
que  formen  mucha  espuma,  échese  en  ella  azocar  molida  y 
un  poco  de  flor  de  naranja;  póngase  á  cocer  en  una  cacero- 
la suficiente  cantidad  de  leche  también  con  azúcar  y  flor  de 
naranja.  Cuando  ésta  cueza  se  echan  las  claras  por  cucha- 
radas, se  retiran  lo  mismo  una  á  una  y  se  dejan  escurrir  so- 
bre un  tamiz;  en  seguida  se  quita  la  mitad  de  la  leche;  se 
baten  las  yemas  y  se  echan  en  esta  leche;  menéese  con  una 
cuchara  de  madera  y  se  quitan  del  fuego  luego  que  estén 
bien  ligadas;  las  claras  se  colocan  en  el  plato  y  se  echa  por 
encima  la  salsa  pasada  por  una  estameña.  Se  emplean  ordi- 
nariamente doce  huevos  y  media  libra  de  azúcar  para  media 
azumbre  de  leche. 

1.010.  Huevos  en  albondiguilla* — Se  cuecen  los  huevos  y 
ae  pican  muy  menudamente  sus  claras;  las  yemas  se  despa- 
churran, y  se  añade  perejil  picado  y  salsa  de  nata  bien  re- 
ducida. Cuando  todo  está  en  sazón  ae  forman  albondigui- 
llas, que  se  revuelven  con  miga  de  pan  para  empaparlas  se- 
gunda vez  con  huevo  y  freirías,  y  se  sirven  cubriéndolas 
con  perejil  frito. 

1.011.  Huevo»  mejidos. — Bátanse  mucho  dos  yemas  en 

LA  COCIKBMX  POBLANA. — TOM.  I. — 20. 


906 

una  tiza,  añádate  una  onza  de  azúcar,  échete  agua  hirvien- 
do y  se  menea  á  una  mano  para  que  se  mezcle  bien. 

1.012.  Huevo*  utreüadot, — Cuezase  agua  en  una  cacerola 
con  una  mitad  de  vinagre  y  suficiente  cantidad  de  sal,  retí* 
resé  del  fuego,  quiébrense  encima  uno  á  uno  los  huevo» 
que  se  quieran  estrellar,  sin  reventarlos  ni  menearlos.  Cuan- 
do  las  claqas  estén  cuajadas  se  sacan,  empezando  por  loe 
primeros  y  se  ponen  en  agua  fría.  Quítense  de  esta  agua 
y  se  ponen  en  el  platón  sobre  un  guiso  de  acederas  ó  espi- 
nacas, etc. ,  ó*  sobre  un  puré  cualquiera,  ó  si  no  con  una 
salsa  compuesta  de  vinagre  y  moztaza,  ú  otra  de  este  gé- 
nero. 

1.013.  Huevos  en  mantequilla  arrebatada. — Después  de  ro- 
tos los  huevos  en  el  platón  como  los  anteriores,  y  con  la  mis- 
ma precaución  de  no  reventar  las  yemas,  se  freirá  en  una 
sartén  mantequilla  hasta  que  esté  casi  quemada,  se  espuma 
y  cuela,  y  después  de  vuelta  á  calentar  se  echa  sobre  lea 
huevos.  Se  escurren  éstos  con  la  manteca  en  la  sartén,  que 
se  pone  sobre  la  ceniza  caliente  para  que  se  acaben  de  ha- 
cer. Hecho  esto,  se  ponen  en  el  platón  y  se  rocían  con  vi- 
nagre calentado  en  la  sartén;  es  menester  que  el  vinagre  es- 
té casi  cociendo. 

1.014.  Huesos  pa$ado$  por  agua.  —Tómense  huevos  lo 
mas  fresóos  posible;  póngase  á  hervir  agua,  y  cuando  cueza 
á  borbotón  échense  los  huevos  enteros  y  con  cuidado  para 
que  no  se  rompan;  se  dejan  dos  6  tres  minutos,  según  se 
quieran  de  cocidos;  retírese  todo  del  fuego,  dejando  dentro 
los  huevos  un  minuto  para  que  se  cuaje  bien  la  ciara.  Se 
sacan  y  se  sirven. 

1.015.  De  otro  modo. — Si  fuese  necesario  hacer  muchoa 


307 

de  una  vez,  y  para  que  iodos  salgan  iguales,  se  ponen  en 
una  caldera  llena  de  agua  á  hervir  y  cuando  esté  hirviendo 
se  ponen  los  huevos  en  un  tenatito  y  se  meten  dentro  de  la 
caldera;  de  este  modo  todos  saldrán  á  un  tiempo  y  en  un 
punto.     Tres  minutos  son  suficientes. 

1.016.  Huevo*  con  queso. — Se  hace  una  costrada  compues- 
ta de  mitad  de  queso  y  mitad  de  pan;  se  rompen  los  huevos 
sobre  ella,  se  expolvorean  con  queso,  pimienta  y  nuez  mos- 
cada, y  se  ponen  á  un  fuego  lento,  coloreándolos  con  una 
plancha  hecha  ascua. 

1.017.  Huevos  blandos. — Póngase  á  hervir  agua,  échense 
en  ella  los  huevos  que  se  quieran:  cuezanse  cinco  minutos 
y  métanse  de  repente  en  agua  fría;  la  clara  estará  cocida  y 
la  yema  blanda,  quítense  los  cascarones  con  precaución. 

1.018.  Huevos  compuestos* — Se  toman  huevos  fresóos  y 
s?  hace  un  agujero  pequeño,  por  donde  se  saca  su  conteni- 
do; y  con  yemas,  caldo  del  puchero,  azúcar,  canela  y  almen- 
dras picadas,  se  hace  una  pasta,  y  con  ella  se  rellenan  los 
cascarones  de  los  huevos  con  un  embudo  pequeño,  tapando 
el  agujero  con  un  poco  de  cascaron :  se  cuecen  así  y  se  sir- 
ven. 

1.019.  Huevos  en  baturrillo, — Se  deslíe  manteca  en  una 
cazuela  y  se  echan  los  huevos,  sazonándolos  y  meneándolos 
á  menudo  con  tres  ó*  cuatro  manojillos  de  popotes  atados 
unos  á  otros;  ae  echa  después  un  poco  de  nata,  y  al  tiempo 
de  servirse  otro  poca  de  zumo  de  limón. 

1.020.  Huevos  de  varios  modos. — Preparados  como  se  ha 
dicho,  se  añade  jamón  cocido  en  pedacitos  y  una  cucharada 
de  sustancia;  también  se  hace  con  mollejas  de  ternera,  pun- 
tas de  espárragos,  cojollitos  de  alcachofas  6  coliflor. 


906 

1.021.  Huevo  monstruo,  —Se  parten  ana  docena  de  hue- 
ro» y  se  separan  las  yemas  de  las  claras;  tómese  una  vejiga 
limpia,  y  se  le  llena  de  yemas  bien  batidas;  se  ata  muy  bien 
para  que  no  penetre  el  aire,  7  se  suspende  en  agua  hirvien- 
do hasta  que  los  yemas  tomen  consistencia;  después  se  saca 
7  enfría  7  con  cuidado  se  rompe,  7  tomando  otra  vejiga 
mayor,  se  echan  las  claras,  colocando  las  yemas  ya  cuajadas 
en  medio;  vuélvase  á  cocer,  7  cuando  se  crea  conveniente 
se  saca,  7  rompiendo  la  vejiga,  quedaráhecho  el  huevo,  que 
se  puede  servir  en  una  salsa  de  aves  ó  en  ruedas. 

1.022.  Huevos  duros.  -Cuezanse  con  cascara  7  cuando  es- 
tén duros  se  sacan  7  se  les  quita  aquella;  córtense  en  rue- 
das, 7  puestas  en  un  plato  se  sirven  con  sal,  aceite,  vinagre 
7  pimienta. 

Suelen  servirse  de  este  modo  para  adornar  ensaladas  cru- 
das, platos  de  espárragos,  coliflores,  etc. 

1.023.  Huevos  revueltos  con  jitomate. — Frianse  los  jitoma- 
tes 7  después  de  sazonados  se  echan  los  huevos  bien  bati- 
dos, proporcionando  su  cantidad,  7  revuélvase  todo  hasta 
que  estén  bien  cuajados. 

1.024.  Huevos  con  cebolla. — Se  ponen  del  mismo  modo 
que  los  anteriores,  7  añadiéndoles  un  poco  de  calabacín  pi- 
cado, se  formará  lo  que  suele  llamarse  pisto. 

1,026.  Huevos  escalfados. — Se  unta  un  plato  hondo  con 
manteca,  expolvoreándolo  con  un  poco  de  sal;  pónganse  en* 
cima  los  huevos:  deslíase  un  poco  de  manteca  con  una  cu- 
charada de  leche  ó  nata,  7  cuando  esto  bien  caliente  se 
echa  por  encima,  se  tapa  bien  poniendo  el  plato  á  fuego 
lento,  7  se  sirve. 

1,026.  Huevos  rellenos  guisado». — Se  endurecen  los  hue- 


309 

▼os  y  se  parten  en  dos  mitades,  se  sacan  las  yemas  y  se 
muelen  con  miga  de  pan  mojada  en  crema;  añádase  una 
parte  igual  de  manteca,  una  6  dos  yemas,  sal  y  pimienta. 
Con  este  conjunto  se  rellenan  los  hueToe  y  se  les  cubre  con 
miga  de  pan  humedecida  con  mantees;  se  echa  el  resto  del 
relleno,  que  se  deslíe  con  un  poco  de  caldo  y  se  deja  que  de* 
un  hervor;  también  se  rellenan  con  pescado  picado  y  se  usa 
aceite. 

1.027.  Huevos  con  perejil.  —En  una  vasija  ancha  se  pone 
perejil,  ajos  fritos,  asafran,  sal,  pimienta,  una  hoja  de  yer- 
babuena  y  yerbas  finas,  todo  en  rama;  se  echan  los  huevos 
estrellados,  se  hace  que  d¿  un  hervor,  y  se  sacan  con  una 
espumadera  grande. 

1.028.  Huevos  con  leche,— A  la  manteca  desleída  se  aña- 
dirá perejil  muy  picado,  sal  y  pimienta  y  un  vaso  de  nata, 
en  la  cual  se  haya  desleído  de  antemano  una  cucharada  de 
harina.  Cuando  la  salsa  esté  en  punto  se  ponen  en  ella  los 
huevos  cocidos  hechos  ruedas. 

1.029.  De  otro  modo. — Se  deslíen  seis  huevos  con  dos  on- 
eas  de  azúcar,  una  cucharada  de  flor  de  naranja  y  un  cuar- 
tillo de  leche;  se  pone  esto  en  la  vasija  6  plato  muy  hondo 
en  que  se  ha  de  servir,  se  deja  cocer  tres  cuartos  de  hora  en 
el  baño  de  María,  se  polvorea  con  azúcar  muy  fina  y  des- 
pués se  pasa  por  encima  la  plancha  hecha  ascua,  y  puede 
servirse  frío  ó  caliente. 

1.030.  Huevos  en  espuma, — Por  cada  media  docena  de 
claras  de  huevo  se  tomarán  dos  onzas  de  azúcar  rosada  y  se 
batirán  hasta  que  haga  mucha  espuma;  se  tendrá  á  calentar 
en  un  cazo  6  cazuela  nueva  leche  de  cabras  ú  ovejas,  y  cuan- 
do esté  caliente  se  echa  á  cucharadas  aquella  espuma  á  co- 


310 

oer  un  poco,  7  luego  ae  sao*  oon  una  espumadera  para  que 
escurra  la  leche,  y  ae  polvorea  con  canela. 

1.031.  Huevos  fritos.  —Póngase  á  freír  aceite  7  cuando 
esté'  bien  rujíente  échese  en  él  el  huevo,  7  con  una  cucha- 
ra de  hierro  plana  salpíquese  el  aceite  por  encima  para  que 
ae  cubra  la  yema;  sazóneseles  oon  sal  molida  7  se  sirve; 
friendo  uno  á  uno  salen  mejor. 

1.032.  De  otro  modo. — Luego  que  la  manteca  ó  aceite  es- 
tá en  su  punto  se  estrellan  7  echan  uno  después  de  otro,  7 
ouando  están  fritos  se  sirven  oon  sal  por  encima  ó  oon  un 
poco  de  jitomate,  jamón  ó  acederas;  generalmente  salen 
mejor  fritos  en  cazuela  que  en  sartén,  porque  en  esta  últi- 
ma se  arrebatan  7  pierden  mucho. 

LEGUMBRES. 

1.033.  Papas  á  la  parisiense. — Póngase  en  una  cacerola 
un  pedazo  de  manteca  oon  una  cebolla  muy  picada;  y  déje- 
sele freir  hasta  que  tome  un  buen  color. 

Échese  un  vaso  de  agua  y  las  papas  mondadas  oon  pimien- 
ta, sal,  un  ramito  compuesto  de  yerbabuena,  perejil,  estra- 
gón, etc.,  dejando  que  oueza  todo  poco  á  poco,  y  antes  de 
servir  este  guiso  se  quita  dicho  ramito. 

1.034.  Papas  cocidas  al  vapor. — Se  ponen  las  papas  á  00- 
oer  enteras  en  una  olla  de  barro  ó  cobre,  en  la  que  se  echa 
un  poco  de  agua,  y  sobre  la  tapadera  se  pone  un  lienzo  para 
evitar  la  evaporación.  De  este  modo  son  menos  acres  que 
cocidas  de  otra  manera. 

1,036.    Popas  á  la  Naneta.— Hágase  en  la  cacerola  una 


311 

masa  de  buen  color  con  mantequilla  y  harina,  desliase  con 
caldo  de  carne  ó  de  vigilia;  échense  las  papas  crudas,  pela- 
das y  en  pedazos  delgados;  añádase  sal,  pimienta,  perejil  en 
rama  y  demás  yerbas.  Se  pueden  servir  solas  ó  con  la  car- 
ne asada  que  convenga. 

1.036.  Papas  á  la  alemana, — Pélense  y  pártanse  en  reba- 
nadas las  papas  cocidas  en  estofado,  córtense  pedacitos  de 
pan  delgados  y  cuadrados,  f ríase  todo  en  mantequilla,  pón- 
gase en  un  plato  hondo  y  riégúese  con  un  cocido  de  harina 
de  papas.  Antes  de  servirlas  se  puede  dar  color  al  guiso  ro- 
dándolo con  asdcur  y  poniéndolo  en  el  horno  de  campana. 
También  se  puede  dorar  con  una  plancha  hecha  ascua. 

1.037.  Papas  á  la  polaca. — Pónganse  á  cocer  papas  bien 
lavadas  en  agua  con  un  poco  de  mantequilla,  dos  cebollas 
grandes  en  cuatro  pedazos,  tomillo,  laurel,  clavo,  sal  y  pi- 
mienta en  grano;  déjese  cocer  hasta  que  se  pueda  hundir  un 
dedo  dentro,  pónganse  en  un  cedazo  á  que  escurran,  se  pe- 
lan, se  parten  en  dos  ó  tres  pa  rtes,  y  por  encima  se  cubren 
con  salsa  blanca  ó  con  alcaparras. 

1.038.  Papas  en  manteca  quemada. — Cuezanse  del  modo 
ordinario,  pélense,  córtense  en  pedazos  y  pónganse  en  e 
platón  rodeadas  de  perejil  en  rama.  Se  riegan  con  una  ssl 
sa  de  manteca  quemada  y  se  sirven  prontamente. 

1.039.  Papas  en  sartén.  — Se  pelan  y  cortan  en  rebanada 
delgadas  después  de  cocidas,  se  ponen  en  una  sartén  coi 
muy  poca  mantequilla  ó  manteca,  se  vuelven  hasta  que  te 
men  un  color  subido;  se  sirven  sin  salsa.  Fara  guarnecerla 
se  pueden  emplear  las  espinacas,  relleno  de  carne  ó  rops 
vieja  en  lugar  de  las  cortezas  de  pan  fritas. 

1.040.  Papas  á  la  ama  de  casa. — Lávense  bien  y  pongan 


312 
se  á  cocer  en  el  puchero  cuando  el  caldo  este*  hecho,  y  sá- 
queme  antee  que  te  deshagan;  sírvante  bien  calientes  con 
mantequilla  fresca  en  otro  plato;  cada  uno  se  sirve  de  ella 
al  tiempo  de  comerlas. 

1)041.  Papa»  en  guieado  de  camero. — Estando  medio  co- 
cidas las  papas,  se  pelan,  y  parten  por  la  mitad  si  son  muy 
gordas;  se  ponen  en  una  cacerola,  en  laque  se  habrá  puesto 
á  cocer  carnero,  y  se  concluye  como  el  guisado  de  éste  con 
nabos. 

1.042.  Popas  con  ceboÜae. — Póngase  á  freír  cebolla  en 
mantequilla,  córtense  papas  á  medio  cocer  y  acábense  de 
hacer  en  la  cebolla  frita;  mójense  con  caldo  de  puchero  ó 
de  vigilia  y  háganse  cocer  muy  lentamente. 

1.043.  Papae  al  blanco. — Pónganse  en  una  cacerola  con 
perejil  y  cebolla  picados,  las  papas  cocidas  y  cortadas  como 
en  ensalada,  rehóguense,  mójense  con  leche,  cuidando  de 
menearlas  bien,  y  sírvanse  antes  que  cuezan. 

1.044.  Papae  á  la  crema. — Después  de  cocidas,  peladas  y 
cortadas,  se  pone  en  una  cacerola  un  pedazo  de  mantequilla 
amasada  con  harina,  se  deslíe  con  nata,  se  sazona  con  sal  y 
pimienta,  se  menea  esta  salsa;  cuando  esto  próximo  á  cocer 
se  echan  las  papas,  se  saltean  y  sirven  bien  calientes. 

1.045.  Papas  á  la  holandeta. — Hágase  una  masa  de  las 
papas  como  las  precedentes,  rehogúese,  sazonándola  con 
sal,  pimienta  y  yerbas  finas  picadas;  se  moja  con  un  poco 
de  jugo  de  vaca,  se  forman  bolas,  se  rebozan  en  yemas  de 
huevo  batidas,  se  fríen  y  se  sirven  guarnecidas  de  perejil 
frito. 

1.046.  Papae  d  la  baringoU. — Tómense  papas  crudas  de 
medio  grandor,  pélense  y  pónganse  á  cocer  en  caldo  de 


313 

carne  ó  de  vigilia  y  agua  con  nn  poco  de  aceite,  sal,  pimien- 
ta, raíces,  algunas  cebollas  y  perejil  en  rama;  cuando  estén 
cocidas  y  que  no  tengan  mas  caldo,  déjense  freir  en  el  acei- 
te y  que  tome  buen  color;  se  sirve  con  salsa  de  aceite,  vi- 
nagre, sal  y  pimienta. 

1.047.  Papas  en  tocino. — Se  fríe  mucha  mantequilla,  se 
deslíe  en  ella  harina;  cuando  esta  masa  tome  un  color  subi- 
do sazónese  con  sal,  pimienta  y  perejil  en  rama;  añádase  to- 
cino magro  y  gordo,  cortado  en  pedazos,  y  déjese  medio 
cocer  en  la  masa;  entonces  se  echan  las  papas  crudas  des- 
pués de  peladas  y  cortadas.  Cuando  estén  cocida)  espúmen- 
se y  se  sirven  prontamente. 

1.048.  Papas  con  perejil. — Córtense  en  pedazos  papas  co- 
cidas á  lo  estofado,  pónganse  en  una  cacerola  con  un  buen 
trozo  de  mantequilla,  sal  y  pimienta  en  grano;  saltéense  de 
tiempo  en  tiempo  en  un  buen  fuego,  después  de  lo  cual  se 
rehogarán  con  una  salsa  hecha  con  un  buen  pedazo  de  man- 
tequilla, perejil,  ajos,  todo  picado  muy  menudo,  sal,  pimien- 
ta y  zumo  de  limón,  amasado  todo  junto  en  una  cacerola 
sobre  fuego  lento.  Sírvase  este  guiso  lo  mas  pronto  posible. 

1.049.  Papas  en  salsa  blanca. — Cuezanse  las  papas,  pé- 
lense estando  lo  mas  calientes  que  se  puedan  aguantar,  cór- 
tense en  rajas,  y  pónganse  éstas  arregladitas  en  un  platón; 
sobre  ellas  se  echa  una  salsa  blanca. 

1.050.  Papas  rellenas. — Lavadas  y  mondadas  se  les  hace 
con  un  cuchillo  un  agujero  en  medio  y  se  pone  en  él  un 
relleno  hecho  con  carne  cocida  antes  ó  jamón  picado,  hue. 
vo,  cebolla,  jamón,  perejil  y  roiga  de  pan  todo  bien  mez- 
clado. £1  interior  de  la  papa  debe  untarse  antes  con  man- 
teca.    Rellenas  así  las  papas,  se  ponen  en  una  cacerola  con 


314 

manteca  y  cebolla  á  que  te  frían  un  poco,  y  se  le  añade  al* 
gtin  caldo  6  agua,  haciendo  despuea  una  salsa. 

1.061.  Papa$  en  «aba. — Se  pelan  y  cuecen  entena  con 
cebolla  y  aal,  y  cuando  están  cocidas  pero  no  deshechas,  se 
apartan,  sacándolas  y  poniéndolas  en  un  plato  para  que  se 
enfríen;  después  se  las  corta  en  trozos  grandes  y  se  les  va 
poniendo  en  el  platón  donde  se  han  de  serrir,  y  se  aderesmn 
con  aceite  6  manteca  derretida,  un  polvo  de  pimienta,  sal 
en  grano  y  un  poco  de  vinagre. 

1.062.  Papas  en  mantequilla. — Se  cuecen  las  papas  -y  se 
rebanan  delgadas,  después  se  toma  una  poca  de  mantequi- 
lla y  se  pone  en  una  sartén,  se  le  agrega  una  cucharada  de 
harina;  ya  que  ha  hervido  un  poco  se  le  echa  una  poquita 
de  agua,  una  vez  incorporada  se  le  agregan  las  papas,  pi- 
mienta y  perejil  picado:  así  que  haya  hervido  un  pooo,  se 
apartan  del  fuego  y  se  incorporan  unas  yemas  de  huevo, 
un  poquito  de  sumo  de  limón  y  un  poco  de  agua  fría. 

1.063.  Papa»  rtUenas. — Se  cuecen  las  papas  enteras  con 
cascara  y  después  se  pelan,  se  les  quita  una  ooronita  y  con 
un  cuchillo  se  les  saca  la  pasta  para  .rellenarlas  del  modo  si- 
guiente: 

Se  fríe  ajo,  cebolla  y  perejil  muy  menudo,  se  le  echa  cla- 
vo, canela,  pimienta  y  un  poco  de  orégano  todo  molido.  En 
este  recaudo  se  echan  unos  sesos  picados  y  un  poco  de  acei- 
te y  se  rellenan  las  papas,  tapándolas  con  la  ooronita  que  se 
les  quita.  Después  se  ponen  en  el  platón  que  se  ha  de  ser- 
vir y  se  les  echa  el  caldo  siguiente  que  ya  se  tendrá  hecho: 
se  fríe  jitomate,  cebolla  y  ajo,  se  polvorea  con  clavo  y  ca- 
nela, se  agrega  un  poquito  de  vinagre  y  caldo  de  carne  de 


315 

puerco;  se  pone  á  cocer  á  que  se  sazone  y  al  servir  las  papas 
se  les  echa  por  encima. 

1.054.  Papas  con  chile.  —Se  desvenan  unos  chiles  verdes 
del  tiempo,  se  muelen  muy  remolidos,  se  fríen  en  aceite 
y  manteca  agregándole  unos  diente  de  ajo  también  moli- 
dos, ya  que  está  bien  frito  se  les  echa  una  poquita  ele  agua 
para  que  se  sazone,  mas  aceite  de  comer  por  encima,  y  las 
papas  cocidas  y  partidas  en  cuarterones  se  meten  en  esta 
salsa. 

1.055.  Papas  guisa/las. — Pónganse 4  freir  las  papas,  se 
les  echa  agua  y  sal,  y  cuando  están  á  medio  cocer  se  les 
echa  de  todas  especias,  perejil,  ajos  fritos,  azafrán  y  miga 
de  pan  mojado;  y  desleído  todo  se  echa  en  las  papas,  deján- 
dolas cocer  un  rato.  Se  ponen  también  las  papas  á  freir  con 
chile  del  tiempo  y  sal,  se  añade  agua,  se  machacan  unos 
ajos,  cominos  y  unas  ruedas  de  papas,  se  desata  con  vinagre 
y  se  deja  cocer  un  rato. 

1.056.  Papas  para  adornot. — Se  escojerán  las  mas  peque- 
ñas y  redondas;  pélense,  pónganse  á  cocer  en  jugo  de  carne 
y  así  sirven  para  adornar  el  platón  que  convenga,  6  para  me- 
terlas en  el  cuerpo  de  alguna  ave  en  lugar  de  cebollas,  6 
mezcladas  con  ellas. 

Guando  se  quieren  poner  debajo  de  una  pierna  de  carne- 
ro asada,  6  toda  otra  especie  de  carne  en  asador,  se  empie- 
za  por  cocerlas  en  agua  6  mejor  en  estofado,  y  se  colocan 
en  la  grasera  para  que  tomen  gusto  y  color. 

Aunque  debe  preferirse  para  el  buen  condimento  de  las 
papas  la  mantequilla,  donde  no  la  haya  fresca  puede  usarse 
la  manteca. 

1.057.  Papas  estofadas. — Se  cuecen  en  agua,  se  pelan  y 


316 

•e  cortan  en  rajas,  ae  ponen  en  una  cacerola  con  manteca, 
sal,  pimienta,  perejil  y  cebolla  picadas  con  un  poco  de  ha- 
riña;  se  les  echa  el  caldo  de  carne  ó  vigilia  y  un  vaso  de  vi- 
no, sirviéndolas  con  poca  salsa. 

1.058.  Papas  en  Malta. — Cocidas  ya  las  papas  y  cortadas, 
ténganse  lo  mas  caliente  posible.  Se  deslíe  harina  de  papas 
con  manteca,  caldo,  sal  y  pimienta,  en  poco  fuego.  Tan  lue- 
go como  esta  salsa  esté  suficientemente  ligada,  se  añadirá, 
si  se  quire,  alguna  anchoa  picada  ó  alcaparras,  y  con  ella 
se  regarán  las  papas.  Sírvase  lo  mas  caliente  posible. 

1.059.  Papa*  fritas. —Pélense  las  papas  crudas,  córtense 
en  rebanadas  delgadas  ó  por  cuarterones  largos,  rebócense 

« 

en  masa  y  f ríanse  con  buen  color:  antea  de  servirlas  se  es- 
polvorea con  sal  machacada.  Debe  emplearse  con  prefe- 
rencia para  la  masa  la  harina  de  papas. 

1.060.  De  otro  moda. — Después  de  peladas  se  saca  por 
medio  de  cucharitas  cortantes,  ó  con  cuchillos  á  propósito 
la  parte  carnosa  de  estos  tubérculos,  que  vienen  á  formar  co- 
mo estrellas  ó  bien  filetes;  se  pondrán  en  manteca  cuando 
esté  muy  caliente  y  de  modo"  que  queden  cubiertas  ó  sea 
nadando  en  ella;  se  dejarán  freír  hasta  su  punto,  procuran- 
do servirlas  inmediatamente  de  sacadas,  excurrídas  y  ex- 
polvoreadas con  sal  muy  fina. 

El  modo  vulgar  de  freirías  consiste  en  mondarlas  simple- 
mente y  cortarlas  en  rebanadas  delgadas  ó  en  cuarterones 
largos,  y  freirías  en  manteca  ó  aceite  hasta  que  tome  un 
buen  color.  Antes  de  servirlas  se  expolvorea  con  sal  moli- 
da y  pasada  por  tamiz. 

1.061.  Papas  cocidas — Se  tornearán  ó  cortarán  con  cu- 
charitas ó  cuchillos  á  propósito,  como  antes  se  ha  dicho,  y  ae 


317 

cuecen  en  agua  hirviendo  por  el  tiempo  necesario,  con  «al, 
procurando  ponerlas  en  agua  fría  antes  que  quieran  desha- 
cerse, y  luego  se  calientan  con  caldo  bien  reducido. 

1.062.  Papas  relimas.— Se  pelan  en  crudo  y  se  les  hace 
un  agujerito  para  rellenarlas.  El  relleno  se  hace  de  sesos 
cocidos  y  picados,  fritos  en  aceite  con  un  poco  de  perejil  pi* 
cado,  pan  rallado  y  un  polvo  de  pimienta.  Se  les  vuelve  á 
poner  la  tapa  y  se  les  da  un  ligero  hervor  en  un  poco  de 
agua,  en  un  trasto  extendido;  para  la  salsa  se  asan  unos  ji« 
tomates  y  con  un  pedazo  de  pan  frito  se  muelen,  se  ponen 
en  una  cazuela  en  la  que  se  han  frito  antes  unos  gajo»  de  ce- 
bolla, los  jitomates  y  el  pan;  ya  que  está  todo  muy  frito, 
se  le  echa  un  poco  de  caldo  de  carne  de  puerco,  especias 
molidas  y  un  poco  de  tomillo  deshojado,  se  deja  espesar 
mucho  y  de  este  caldo  se  van  bañando  las  papas  rellenas, 
se  pone  en  una  hornilla  nada  roas  caliente,  y  encima  una 
lata  con  lumbre. 

1.063.  Arroz. — El  arroz  puede  hacerse  con  pollos,  pie*s  de 
cerdo,  morcilla,  salchicha,  pájaros,  lomo,  carne,  bacalao, 
etc.  Suponiendo  que  se  hace  con  costillas,  se  dispondrá  del 
modo  siguiente:  se  cuecen  éstas  con  sal,  luego  se  ponen  á 
freír  con  aceite,  ajos,  parejil,  jitomate,  un  poquito  de  cebo- 
lla, pimienta  y  jamón.  El  arroz  en  seco  se  restrega  en  un  pa- 
ño para  que  suelte  el  polvo  y  se  echa  en  la  cazuela  meneán- 
dolo; se  echa  el  agua,  teniendo  presenta  que  cada  pocilio  de 
arroz  embebe  sobre  dos  y  medio  de  agua;  añádase  un  polvo 
de  pimienta  y  clavo,  y  se  deja  á  la  lumbre  hasta  que  quede 
cocido  y  entero  el  grano.  Se  aparta  de  la  lumbre  y  se  cu- 
bre con  una  cobertera  con  rescoldo. 

1.064.  Arroz  eon  chile  ancho.— Se  fríen  un  poco  de  aceite 


318 

y  cebolla,  y  cuando  esté*  bien  rehogado  te  echa  el  arroz; 
rehogúese  también  un  poco,  y  .después  ae  colocan  loa  chiles 
enteros,  llenando  la  oasuela  de  agua,  y  se  sonándola  con  sal 
y  un  poco  de  pimienta  y  azafrán. 

1.065.  Arroa  á  la  vaJeneíaiui.~-Rehóguese  el  arros  en 
aceite,  cebolla,  ajo  picado  y  perejil,  un  poco  de  tomate,  y 
cuando  este*  bien,  échesele  el  agua,  teniondo  cuidado  de 
echarla  en  buena  proporción;  un  poco  antes  de  estar  ente- 
raraente  cocido  retírese  y  se  deja  media  hora  enfriar;  de* 
ben  quedar  los  granos  sueltos,  sin  caldo,  y  no  estar  des* 
hechos. 

1.066.  De  otro  modo. — Se  prepara  una  sartén  cuyo  fondo 
sea  igual  á  la  hornilla  donde  so  ha  de  poner  y  que  tenga 
ésta  fuego  de  carbón  6  lefia  bien  encendido;  se  le  echa  acei- 
te 6  manteca  en  proporción,  y  cuando  está  bien  caliente  se 
frien  en  ella  unos  cuantos  chiles  anchos,  los  que  después  de 
fritos  se  sacan  para  limpiarlos  cuando  se  necesiten;  se  echan 
en  seguida  á  freir  pollos  6  patos,  lomo  de  cerdo  y  salchi- 
chas, todo  hecho  pedasos,  y  cuando  estén  dorados  se  ponen 
dos  6  tres  dientes  de  ajo  mondados  y  cortados,  jitomate, 

.  perejil,  sal,  azafrán  y  un  poco  de  pimienta  y  clavo;  se  re- 
vuelve todo  esto  hasta  que  está  bien  frito;  entonces  se  po- 
nen alcachofas,  chícharos  6  frijoles  blancos  desgranados  6 
bion  hechos  pedazos;  se  le  da  dos  vueltas  para  que  se  reho- 
gue, y  en  seguida  se  aumenta  caldo  ó  agua  caliente,  y  se 
deja  hervir  hasta  que  todo  está  cocido.  Entonces  se  aviva 
el  fuego,  se  aumenta  el  caldo  necesario,  y  cuando  cuece  se 
echa  el  arroz  suficiente  hasta  que  meneando  con  una  cuchara 
se  tenga  tfsta  derecha  en  el  centro;  se  hace  cocer  á  gran  fue- 
go; á  medio  cocer  se  le  disminuye  el  fuego  y  se  deja  mar- 


819 

ohar  poco  á  poco  (mas  á  todo  esto  sin  tocarlo  ni  menearlo); 
cuando  está  á  punto  se  saca  y  después  de  un  poco  de  repo- 
so, se  sirve. 

1,067*  Arroz  en  croquetas, — Prepárese  un  cuarterón  de 
arroz,  como  para  hacer  un  pastel;  pero  en  lugar  de  meterlo 
en  el  molde,  háganse  las  pelotillas,  que  se  empapan  en  hue- 
vos batidos  con  azúcar.  Empánense  con  pan  rallado;  vuél- 
vanse á  empapar  en  huevo  y  á  empanar  en  el  pan  rallado 
por  segunda  vez  y  fríanse. 

1.068.  Arroz  con  polla*, — Se  limpian  y  cortan  en  peda* 
sos  tres  ó*  cuatro  pollos,  se  fríen  bien  en  sartén  6  en  cazue- 
la de  barro,  con  manteca,  se  los  aumenta  uno  6  dos  dientes 
de  ajo,  jitomate,  perejil,  alcachofas  y  ohí charos;  se  rehoga 
todo  bien,  se  aumenta  un  poco  de  chile  huauchinango,  pi- 
mienta, clavo  y  un  poco  de  azafrán,  se  pone  el  arroz  y  des* 
pues  de  dos  vueltas  se  cubre  bien  con  caldo,  y  se  hace  co- 
cer á  grande  fuego  por  el  orden  anterior. 

Se  puede  hacer  con  gallinas,  perdices,  etc. ;  mas  cuando 
sean  aves  duras  6  carnes,  no  se  pondrá  el  arroz  sino  después 
que  están  cocidas. 

1.069.  Arroz  con  bacalao  seco. — Se  toma  como  una  libra 
de  bacalao  seco,  se  tuesta  al  fuego,  y  cuando  blandea  se  des- 
hace menudo,  quitándole  las  espinas,  y  luego  se  lava  por 
dos  aguas  frías.  Se  pone  una  sartén,  cazuela  ó  cacerola  al 
fuego  con  aceite,  en  el  que  se  fríen  dos  6*  tres  dientes  de 
ajo,  jitomate  y  perejil;  cuando  está  frito  se  aumenta  el  ba- 
calao bien  escurrido;  chile  del  tiempo,  azafrán,  pimienta  y 
clavo,  se  echa  el  arroz,  se  le  da  dos  vueltas,  y  luego  el  agua 
caliente,  y  se  cuece  como  los  anteriores.  También  puede 
ponárscle  chiles  fritos  6  asados  y  mondados. 


320 

1.070.  Artoz  ó  risotto  á  la  milane$a. — Después  do  picada 
una  cebolla,  se  fríe  en  una  cacerola  con  manteca  hasta  que 
se  dore*  Entonces  se  agrega  una  libra  de  arroz  y  caldo  del 
puchero,  dejando  quo  cueza  hasta  que  esté  blando,  6  bien 
medio  crudo,  que  es  como  les  agrada  á  los  milaneses.  Agre- 
gúese queso  rallado,  un  poco  de  manteca,  apártese  del  fue- 
go después  de  bien  revuelto,  y  sírvase  sazonándolo  antea 
con  pimienta  blanca  en  polvo  y  nuez  moscada. 

1.071.  Arroz. — Se  lava  muy  bien  el  arroz  y  se  pone  á  se- 
car al  sol,  se  echa  manteca  en  una  cazuela  y  allí  el  arroz 
hasta  que  se  dore.  Se  ponen  á  cocer  en  una  olla  los  pollos, 
lomo  de  en  medio,  longaniza,  chorizos  y  jamón ;  ya  que  está 
frito  se  extiende  en  el  fondo  lo  mejor  que  se  pueda,  y  enci- 
ma se  coloca  una  capa  de  pollos,  chorizos,  etc. ,  otra  de  arros, 
otra  de  pollos  y  así  se  sigue  hasta  concluir,  procurando  que 
la  última  sea  de  arroz.  Se  fcica  ajo  y  jitomate  y  se  fríe  en 
bastante  manteca,  y  después  se  agrega  un  poco  de  caldo  en 
que  se  coció  la  carne;  se  muele  clavo,  canela,  pimienta  y 
azafrán;  se  pone  la  tortera  en  la  lumbre  y  por  encima  se  le 

m 

echa  un  poco  de  caldo  de  esta  especia,  lo  cual  se  sigue  ha- 
ciendo hasta  que  se  cuece  el  arroz;  para  que  sea  mas  pron- 
to se  pone  á  dos  fuegos;  ya  que  está  casi  sin  caldo,  se  tues- 
tan unos  chiles  del  tiempo  6  huauch ¡nangos,  se  desvenan, 
ae  rellenan  con  el  mismo  arroz  y  se  entierran  en  el  demás; 
así  se  sirve» 

1.072.  Airo*  con  pescado  ó  bacalao  á  la  catalana.— Se  fríe 
en  una  cazuela  con  aceite  y  manteca  jitomate,  cebolla,  pe- 
rejil y  ajo;  cuando  está  casi  frito  el  recaudo  se  echa  en  él 
el  pescado  en  crudo  á  que  medio  sancoche;  se  saca  y  en  el 
mismo  caldo  se  echa  el  arroa  sin  lavar  y  solamente  limpio 


3¿. 

de  toda  basura.  Ya  que  está  casi  dora* 
panado  6  bacalao  á  que  acabe  de  dorar.  Ua»n 
do  se  le  echa  el  agua  necesaria,  que  ha  de  hervir  á  Doroo- 
tones  y  se  deja  á  fuego  muy  fuerte  durante,  veíate  minu- 
tos ó  media  hora  cuando  mas,  después  de  echarle  la  sal 
conveniente,  y  tapada  la  cazuela.    Se  saca  de  la  lumbre  y 
se  deja  reposar  un  rato  antes  de  servirlo,  mi/ateniendo  la  ' 
cazuela  muy  tapada  para  que  el  arroz  acabe  <*e  eooer  con 
su  propio  vaho. 

1,07$.  Arroz  de  pobre. — Se  fríe  en  manteca  y  aceite,  ajo 
picado,' jitomate  y  perejil  y  allí  se  dora  el  arroz;  ya  que 
está  se  echa  una  poca  de  agua  y  se  tapa  hasta  que  seque; 
el  arroz  no  se  lava,  no  mas  se  limpia. 

1.074.  Arroz. — Desde  la  víspera  se  lava  el  arroz  y  se  po- 
ne á  secar  sobre  una  tabla,  se  deshace  un  poquito  de  azafrán 
en  agua  caliente  y  se  tifie  el  arroz  dejándolo  secar  nueva- 
mente; se  hace  un  refrito  de  todo  recaudo,  agregándole  un  ^ 
polvo  de  pimienta  y  clavo;  se  echa  el  pollo  en  cuartos  par? W 
que  ablande  un  podo  y  en  seguida  el  arroz  con  un  chile  an ; 
cho  entero  desvenado  y  agua  hirviendo  á  que  cubra  el  cor 
tenido,  se  pone  á  fuego  violento.    Ouando  haya  secado  e. 
agua  se  aparta  en  fuego  lento  para  que  no  se  deshaga. 

1.075.  Arroz  d  la  italiana. — Después  de  bien  lava¿ 
escurrido  el  arroz  se  fríe  en  aceite  y  manteca  con  ur- 
de cebolla,  ajo  6  perejil  picado,  nabo  6  col  blar ' 
menudo;  ya  frito  se  le  echa  caldo  de  la  olla  si/ 

solo  un  polvo  dé  pimienta  y  se  deji  sazonar, 

que  este*  suelto,  pues  así  se  sirve. 

1,076b  Alcachofa»  frUae.r^  fríen  dedos  n 

jan  ios  cogollos  solamente,  partiéndolas  ^kr  i 

px  ooonrp&a  FOBjLiNA,-r-TO* 


339 

uervor  en  agua  y  tal ;  ae  fríe  tocino  ma- 
jso  delgadas,  y  allí  Mechan  las  alcachofas;  tam- 
bién 4*  fríen  en  aceité,  rebozándolas  antes  por  un  batido, 
de  yema»  con  un  poco  de  azúcar. 

1,077.  Da  otro  modo. — Se  escojen  las  mas  tiernas;  des- 
pués de  cortadas  en  pedazos,  bien  lavadas  y  secas,  se  ponen 
algún  tiempo  en  una  pasta  hecha  con  un  puñado  de  hari- 
na, dos  huevos,  un  poco  de  vinagre,  otro  tanto  de  aceite, 
sal  y  pimienta;  se  fríen  y  se  sirven  con  perejil  frito. 

1,078. — Alcachofas  asadas. — Después  de  limpias  y  quita- 
das las  hojas  exteriores  se  despuntan  y  se  cortan  por  el  pe- 
zón para  introducir  un  poco  de  tocino  frito  entreverado 
con  sal,  perejil,  ajos  verdes  y  un  poco  de  pimienta.  Se  po- 
nen en  una  cazuela  entre  dos  fuegos  dándoles  vueltas,  y 
aunque  por  lo  exterior  parecen  duras,  interiormente  esta- 
rán tiernas  y  gustosas. 

1.079.  Alcachofas  á  la  pebre. — Se  escojen  las  mas  peque- 
ras, se  parten  en  cuatro  pedazos,  se  les  quitan  las  primeras 

o  jas,  se  corta  la  parte  superior  de  las  otras  y  el  tronco, 
cuecen  en  agua  y  se  sirven  en  agua  fría  con  las  vinagre- 
.»,  sal  y  pimienta. 

1.080.  Alcachofas  á  la  salsa  blanca. — Se  limpian,  cuecen 
ponen  en  agua  fría  como  las  anteriores.  Se  vuelven  s> 

ir  al  tiempo  de  servirlas,  metiéndolas  en  agua  hir- 

•espues  de  quitada  la  parte  interior.  Se  ponen  en 

aliándolas  salsa  blanca  en  el  hueco  del  cogollo. 

mbien  servir  la  salsa  aparte  en  una  salsera. 

cachofas  rellenas.— Se  despojan  de  las  hojas  ex- 

les  hace  dar  un  hervor  en  agua  y  sal,  se  po- 

jlere  á  que  escurran  bien,  ae  tiene  manteca  en 


32$ 

una  cazuela,  y  después  de  rellanar  las  alcachofas  con  un  pi- 
cado de  ajo  crudo,  perejil,  aceite  y  pan  rallado  6  con  carne 
muy  picadita,  se  les  pone  en  ella*  á  fuego  dulce,  cubriendo 
la  cazuela  con  una  tapadera  de  hierro  con  rescoldo  hasta 
que  se  tuestan.  Si  se  quieren  con  salsa,  se  pasan  por  un 
batido  de  yemas  y  se  echa  una  salsa  de  avellanas. 

1,082.  Alcachofa»  guisadas.— So  las  quitan  las  hojas  ex- 
teriores, se  escaldan  y  se  cueceu  en  agua  hirviendo,  se  po- 
nen luego  en  cazuela  con  caldo  sazonado  con  sal  y  un  polvo 
de  pimienta,  se  frie cebolla,  y  en  el  aceite  se  echa  un  puña- 
do de  harina  hasta  que  se  queme,  y  se  vierte  sobre  las  alca- 
chofas, haciendo  una  salsilla  para  darle  dos  ó  tres  vueltas. 
1,083  Alcachofas  coa  tocino. — Se  despojan  de  las  hojas 
exteriores,  y  á  medio  cocer  se  sacan,  escurren  y  se  parten 
por  medio;  fríanse  en  manteca  con  tocino,  sin  dejarlo  con- 
sumir mucho 

1.084.  Alcachofas  en  dulce. — Despuntadas  y  mondadas, 
se  cuecen  en  caldo  y  sal,  después  se  escurren,  echando  so- 
bre ellas  jamón  frito,  mantooa,  cebolla  picada  y  frita;  éche- 
se por  encima  un  poco  de  azúcar,  y  que  dé  algunos  hervo- 
res á  fuego  manso. 

1.085.  Alcachofas  heladas. — Córtense  en  cuatro  6  seis 
partes,  se  les  quitan  los  cogollos  y  se  pasan  por  manteca  en 
una  cacerola,  expolvoreándolas  con  sal  molida,  dejando  que 
cuezan  con  fuego  por  encima  y  debajo,  y  cuando  estén  en 
sazón  y  tomen  color  se  colocan  cou  la  cabeza  para  abajo, 
por  encima  se  les  echa  manteca,  y  parecerán  muy  blancas. 

1.086.  Alcachofas  á  la  italiana.  —Divididas  en  cuatro  par- 
tes iguales,  se  les  quita  el  cogollo  y  se  frotan  con  zumo  de 
limón;  luego  se  cuecen  con  agua,  sal  y  un  poco  de  zumo  de 


314 

limón;  te  retiran  y  se  dejan  escurrir,  sirviéndolas  con  una 
salsa  italiana. 

1,067..  Ensalada  de  alcachofas.— Se  lavan  primero,  se  le 
quitan  las  hojas  de  encima  y  se  les  corta  el  rabo  y  las  pun- 
tas: se  ponen  á  medio  cocer  con  sal,  se  escurren,  se  frie  un 
poco  de  aceite  de  comer  con  ajos  hasta  que  se  doren,  se 
muela  una  poca  de  pimienta,  clavo,  canela  y  se  incorpora 
con  lo  demás;  se  toma  una  olla  regular  y  en  ella  se  ponen 
las  alcachofas  boca  arriba  y  se  les  echa  aceite  hasta  que  so- 
brenade dos  dedos  de  las  alcachofas  y  una  cucharada  de 
vinagre  de  Castilla;  se  tapa  la  olla  con  un  cotense,  y  para 
servirlas  se  adornan  con  vinagre,  chiles,  alcaparras  y  acei- 
tunas. 

1.088.  Ensalada  dt  alcachofas.— Se  lavan  bien  las  alca- 
chofas, se  echan  en  una  olla  con  agua  y  sal  á  que  se  cue- 
zan; ya  que  están  se  sacan  del  agua  y  se  escurren,  se  qui- 
tan las  hojas  gordas  y  secas  que  tienen  y  se  pouen  á  escur- 
rir, se  martaja  un  poco  de  queso  fresco,  se  muele  tantita 
pimienta  en  polvo,  se  revuelve  con  el  queso,  y  se  rellenan 
abriéndoles  las  hojas  y  después  se  cierran. 

1.089.  Salsa  para  guisarlas. — Se  pica  un  poco  de  ajo  y 
ana  poca  de  cebolla,  ambas  cosas  muy  menudas,  un  poco 
de  jitomate  sin  pepitas,  perejil  fresco  picado,  se  echa  man- 
teca y  aceite  en  una  sartén  y  se  frie  el  ajo,  luego  la  cebolla 
ambas  cosas  sancochadas  y  encima  el  jitomate  con  el  pere- 
jil; esto  se  frie  mucho,  se  echa  una  poca  de  agua  y  sal,  pi- 
mienta en  polvo,  tomillo;  ya  que  se  sazonó,  se  le  echa  un 
poco  de  aceite  y  vinagre,  se  quita  de  la  lumbre  y  en  una 
tortera  se  ponen  paradas  las  alcachofas,  y  con  una  cuchara 
se  les  va  echando  la  salsa  por  encima  y  mas  aceite;  se  po* 


325 

nen  á  dos  fuegos  lentos  para  que  no  se  quemen;  se  sacude 
la  tortera  á  cada  momento,  se  tiene  cuidado  que  la  lumbre 
que  tenga  encima  sea  poca  para  que  no  se  doren  las  alca- 
chofas; el  caldillo  ha  de  quedar  espeso,  7  se  sirve. 

1.090.  Ensalada  de  alcachofas.  ~-S*  despuntan  éstas  y  se 
cuecen;  se  muele  queso  añejo  y  se  echa  en  polvo  en  las  ho- 
jas con  pimienta  molida  y  tan  tito  pan  rallado;  se  machacan 
unos  ajos  y  se  fríen  en  aceité  y  allí  se  ponen  las  alcachofas 
con  las  puntas  hacia  arriba,  se  les  pone  un  comal  encima 
con  lumbre  muy  lenta  y  se  sirve. 

1.091.  Otra  de  alcachofas.— Desque*  de  bien  lavadas  y 
cocidas,  se  rellenan  con  ajo,  perejil,  cebolla,  pan  rallado, 
sal  y  pimienta,  se  ponen  en  una  cazuela  con  aceite  y  agrio 
de  limón  entre  dos  fuegos  lentos  y  se  sirve. 

1.092.  Receta  para  componer  alcachofas.  —Se  toman  las 
alcachofas,  se  les  corta  la  punta  y  la  cabeza,  después  se 
ponen  á  hervir  y  á  medio  cocer  se  les  echa  sal,  una  cabeza 
de  ajo  machacada  y  un  poco  de  pimienta  en  polvo,  y  se 
ponen  con  la  cabeza  para  arribu,  para  echarles  aceite  y 
unas  gotas  de  vinagre;  dejándolas  en  infusión  todo  el  tiem- 
po que  quisiere  el  que  las  compone,  y  debe  advertirse  que 
es  un  bocado  exquisito  para  algunis  personas  y  que  no 
puede  faltar  en  una  mesa  de  etiqueta. 

1.093.  Ensalada  de  coliflor. — Se  cuece  la  coliflor  con  sal, 
se  frien  ajos  picados  en  aceite  y  manteca,  allí  se  echa  la 
coliflor,  se  frie  bien,  se  coloca  en  un  platón  y  se  le  echa 
aceite,  vinagre,  aceitunas,  chiles  en  vinagre,  cebolla  pica- 
da, un  poco  de  sal,  pimienta  y  un  poco  de  orégano  de  Chi- 
na que  se  despolvorea  por  encima. 

1.094.  Otra  ensalada  de  coliflor. —Se  pone  á  oocer  con 


3**. 

agua  y  sal,  se  mondan  do*  cabezas  de  ajo  grandes,  se  satl* 
ooehan  ea  manteca  y  aceite,  y  sin  aaoar  los  ajo»  ae  echa 
media  botella  de  vinagre  corriente,  ae  le  agregan  anas  ho- 
jas de  laurel,  un  poco  de  tomillo  y  pol  vo  de  pimienta,  en- 
cima ae  le  echa  la  coliflor  y  se  está  meneando  para  que  se 
incorpore  y  no  se  queme;  se  quita  de  la  lumbre,  se  le  añade 
mas  vinagre  de  Castilla  y  aceite;  se  pone  en  un  platón  y  ae 
adorna  con  chiles,  aceitunas,  alcaparras  y  alcaparrones. 

1,096.  Coliflor  fcabech'tda.  — So  cuece  la  víspera  la  coli- 
flor y  A  otro  día  se  escurre;  se  pica  menudo  perejil  y  cebo- 
lla, se  le  añade  pan  rallado,  queso  fresco,  pimienta,  sal  en 
polvo,  y  se  le  echa  una  taza  de  vinagre  y  aceite,  se  emba- 
rra un  papel  en  manteca  y  se  pone  dentro  de  una  sartén;  se 
pone  una  capa  de  coliflor,  otra  de  queso  y  pan,  el  aceite  y 
vinagre,  la  sal  pimienta,  aceitunas  picadas,  alcaparras,  chi- 
les en  vinagre  en  rebanaditas,  perejil;  de  todo  esto  se  le 
echa  una  capa  encima  y  se  pone  á  dos  fuegos  lentos:  al 
servirla  se  ponen  chiles,  aceitunas  y  alcaparras. 

1,096.  Coliflor. — Se  cuece  la  coliflor  separándole  los  ga- 
jos para  que  se  oueza  dividida;  estando  fría  se  le  quita  el 
agua  y  se  pone  á  escurrir;  se  fríen  en  aceite  ajos  partidos 
en  tiras  delgadas,  y  estando  fritas  ae  bajan  para  que  se  en- 
frien; se  le  pone  vinagre  bastante,  laurel,  orégano,  tomillo, 
sal,  pimienta  en  polvo;  se  vuelve  á  la  lumbre  y  estando  sa- 
zonado con  la  sal  suficiente  se  baja  y  se  le  echa  la  coliflor 
bien  escurrida  y  ae  deja  hervir  un  poco;  se  separa  del  fue- 
go, se  le  echan  alcaparras,  aceitunas,  chiles  en  vinagre  y  más 
aceite;  se  toma  fría.  Para  que  sea  en  adobo  se  le  muele  un 
chile  mulato  6  mas,  según  la  cantidad,  remojado  en  agua 
de  oenisa,  se  lava  y  se  muele  oon  un  jitomate  asado,  bas- 


327 

tafites  ajos  fritos,  cosa  de  reíate  granos  de  pimienta;  se 
fríe  todo  esto  en  aceite,  se  le  echa  un  poco  de  vinagre,  se 
sazona,  se  le  pone  sal  al  gusto,  mas  aceite,  aceitunas  y  al- 
caparras; en  esta  salsa  espesa  se  echa  la  coliflor,  que  tam- 
bién se  toma  fría. 

1.097.  Coliflor. — Se  le  quitau  las  primeras  hojas,  se  la- 
va y  cuece  con  agua  y  sal  con  manteca;  se  sirve  con  una 
salsa  blanca  por  encima. 

1.098.  Coliflor**  á  la  salsa  blanca  ó  morena.  —Limpíense 
y  lávense  bien,  pónganse  á  cocer  en  agua  con  un  poco  de 
sal  y  manteca;  después  de  cocidas  se  colocan  en  el  platón, 
procurando  darles  la  forma  de  una  sola  coliflor,  y  se  riegan 
con  salsa  blanca  6  caldo  colado.  También  se  puede  echar 
en  la  misma  salsa  y  darles  unas  vueltas  en  el  fuego:  de  es- 
te modo  no  tienen  tan  buena  vista,  pero  si  mejor  gusto. 

1.099.  Coliflores  á  la  parmesana. — Prepárense  como  las 
anteriores,  y  riégúense  con  salsa  blanca,  en  la  que  se  echa 
queso  raspado;  se  les  cubre  con  una  capa  de  pan  y  queso 
rallados,  se  doran  en  mantequilla  frita  y  se  los  vuelve  á 
echar  otra  capa  del  pan  y  queso;  un  cuarto  de  hora  antes 
de  servirla  se  ponen  en  un  platón  en  el  horno  de  campaña 
para  que  formen  la  corteza  y  tomen  color. 

1.100.  Coliflores  en  ensalada. — Déjense  enfriar  después 
de  preparadas  y  cocidas  como  ya  se  ha  dicho,  córtense  en 
pedazos  si  no  lo  están,  y  sazónense  con  aceite  y  vinagre, 
sal  y  pimieuta. 

1.101.  Coliflor  frita. — Se  tiene  en  adobo  de  sal,  perejil 
y  vinagre  un  pequeño  rato,  y  después  se  cuece  con  agua  y 
sal:  se  le  deja  escurrir  bien  y  astreboza  en  un  batido  de 
huevo  antes  de  freirse  en  aceite. 


328 

1.102.  OoUfior  rebotada» — Oocida  antas  con  tal,  se  parta 
en  trozos,  que  te  rebozan  oon  huero  batido;  f ríante  y  al 
servirlas  te  expolvorean  con  azúcar. 

1.103.  Coliflor  oon  taba  blanca.— Be  ponen  á  hervir  con 
un  puñado  de  tal.  Guando  el  agua  está  en  ebullición  te  echa 
la  coliflor  después  de  muy  limpia.  Quince  minutos  de  her- 
vor ton  suficientes.  Se  escurre  y  te  enfría  poniéndola  al  bor- 
de del  fogón  en  una  cazuela  tapada.  Se  prepara  una  salta 
blanca  liada  con  dos  6  tres  yemas  de  huevo.  En  el  momen- 
to de  servir,  se  toman  uno  por  uno,  se  escurren  y  se  colo- 
can en  una  olla  con  la  flor  hacia  abajo,  y  luego  se  voltean 
en  un  platón  para  que  la  flor  quede  hacia  arriba.  Se  vierte 
sobre  ellos  la  salta  blanca  muy  caliente,  pero  sin  que  hierva. 

1.104.  Coliflor  con  queso, — Preparada  como  la  anterior, 
se  pasa  á  un  platón,  cuyo  fondo  se  cubre  antes  con  una 
capa  de  queso  rallado,  que  se  echa  igualmente  en  toda  la 
superficie  de  la  ooliflor.  Luego  se  coloca  el  platón  en  el  fo- 
gón con  fuego  suave  debajo  y  mucha  lumbre  enoima,  para 
que  el  queso  se  derrita  y  se  pegue  a  la  coliflor,  que  te  sir- 
ve muy  caliente. 

1.105.  Col  rellena.  -—Se  busca  una  que  este*  un  poco  hue- 
ca y  se  le  saca  el  cogollo;  se  le  pone  primeramente  en  el 
fondo  unas  rebanadas  de  lomo  de  enmedio  y  encima  de  es- 
to ejotes  partidos  en  pedaoitos,  zanahorias  chiquitas,  cho- 
rizón,  longaniza;  para  una  col  regular  se  emplean  cuatro 
onzas  de  jamón  rebanado  y  sal.  Se  amarra  la  col  ya  que  es- 
tá rellena  con  unos  mecatitos,  y  se  pone  en  una  cazuela  oon 
agua  hasta  que  cubra  la  col,  se  fríen  aparte  dos  chiles  an- 
chos en  bastante  manteotur  te  voltean  oon  todo  y  manteca 
en  la  cazuela  á  donde  está  la  col,  se  deja  cocer  todo  y  ya 


329 

que  le  falta  poco  te  le  echan  tres  papas  grandes,  y  par* 
servirla  se  desata,  se  pone  en  un  platón  con  oúidado,  se 
baña  en  su  caldo  y  se  ponen  las  papas  al  rededor. 

1.106.  Col  rellena  para  vitualla. — Se  toma  una  col  grande 
y  muy  blanca,  se  le  quitan  los  troncos  y  primeras  hojas,  se 
cala  por  encima  como  sandia,  esta  cala  se  amarra  con  un 
oordelito,  se  toma  una  olla  proporcionada  á  la  col,  para  que 
no  se  desbarate,  agua  bastante,  sal,  ajos  machacados,  una 
cascarita  de  tequezquite  blanco,  chiquita,  y  ya  que  esta  hir- 
viendo el  agua  en  la  olla,  se  echa  la  col  á  que  se  cueza,  ya 
que  lo  está,  se  saca  con  mucho  cuidado  para  que  no  se  des- 
barate, se  quita  la  cala  y  se  rellena  con  lo  siguiente:  se  fríe 
un  jitomate  picado,  cebolla,  un  poco  de  perejil,  unos  gar- 
banzos cocidos  en  el  puchero,  un  poco  de  caldo  para  que 
cueza  y  se  sazona,  se  le  echa  jamón,  chorizo,  ohorizones, 
longaniza,  peritas,  todo  esto  rebanado,  unos  chícharos  y 
habas  verdes  también  cocidas,  antes  de  rellenar  la  col  se 
sazona  todo  lo  dicho:  *e  pone  una  cazuela  6  sartén  en  que 
quepa  la  col  y  se  fríe  con  un  poco  de  chile  ancho  remojado, 
ajos  y  cominos,  un  poco  de  caldo  del  puchero  y  en  esta 
salsa  se  mete  la  col  bañándola  con  una  cuchara  por  enci- 
ma, y  á  fuego  manso,  se  sazona  hasta  que  seque,  procu- 
rando que  no  quede  salada  ni  desabrida  y  entera  se  lleva 
caliente  á  la  mesa  para  que  se  sirva. 

1 .107.  Coles  rellenas  de  picadillo  como  para  chiles. — Se  les 
quitan  las  coronitas  y  se  les  vuelve  á  poner,  se  amarran 
para  que  no  se  deshagan  y  se  ponen  en  una  cazuela  á  que 
les  bañe  bien  la  agua  con  su  sal:  ya  que  están  cocidas  se 
ponen  á  escurrir,  se  hace  el  adobo  y  después  se  van  abriendo 
las  coles  hoja  por  hoja,  y  se  van  enchilando  y  echándoles 


3» 

^picadillo  y  1»  mayor  parta  se  les  mete  en  el  centro,  ya  qué 
«■tan  biefl  rellenas  te  lee  recejen  las  hojas  y  se  amarran. 

1.108.  Coles  escabechadas. — Se  pican  las  coles  y  se  ponen 
á  cocer  con  sal,  cuando  hayan  hervido  un  poco  se  les  quita 
esta  agua  y  se  les  echa  otra  caliente  para  que  acaben  de  co- 
cer con  mas  sal,  se  pone  la  mon talaya  á  sancochar,  y  allí 
mismo  se  le  echa  jitomate  picado  y  unas  pocas  de  cebollas 
enteras:  ys>  que  esto  está  sancochado  se  saca  y  se  pone  á  es- 
currir, se  pica  muy  menudito  y  se  vuelve  á  poner  con  mas 
jitomate  adonde  mismo  está  el  otro,  ya  que  esto  está  muy 
bien  frito,  se  lavan  las  coles  con  otra  agua  caliente  y  se 
echa  en  la  cazuela  con  agua  correspondiente  también  ca- 
liente y  se  le  echa  un  poco  de  laurel,  tomillo,  orégano  y 
las  cebollas  que  se  frieron  primero,  unas  cabezas  de  ajo, 
pimienta  suelta,  y  un  poco  de  aceite  y  vinagre  al  gusto,  y 
el  jamón  ya  cocido  se  le  echa  en  rebanadas,  con  chorizo- 
nes  y  chorioitos,  todo  esto  se  sazona  con  las  coles  y  para 
llevarse  á  la  mesa  se  adorna  con  ohiles  y  aceitunas. 

1.109.  Coles  rebozadas. — Se  cuece  una  col  como  un  ouar- 
to  de  hora,  poniéndola  después  en  agua  fria,  quítense  las 
hojas  una  por  una  y  se  rebozan,  después  se  vuelve  á  oolocat 
como  si  estuviese  entera,  sujetándola  con  un  cordón  ó*  hilo; 
póngase  á  cocer  y  al  tiempo  de  servirla  se  la  esprime  ponién- 
dola en  un  platón  y  por  encima  se  echa  una  salsa  de  perejil. 

1.110.  Ensalada  de  col  cruda. — Se  pica  muy  fina,  se  po- 
ne al  sereno  y  se  le  muda  repetidas  veces  el  agua  para  que 
pierda  el  sabor,  se  sazona  con  vinagre  y  aceite,  rebanadas 
de  cebolla,  aceitunas,  alcaparras,  chiles  en  vinagre  y  pepi- 
nos si  los  hubiere. 

1.111.  Col  borracha. — Se  hace  dar  un  hervor  á  una  col 


asi 

blanca,  te  deja  enfriar  y  seje  van  metiendo  entre  la* 
hojas  rebanada!  de  lomo  y  chorizo,  todo  crudo.  Una  ves 
rellena  ae  mete  en  una  olla  untada  de  manteca,  te  le  eolia 
jitomate,  oebolla  y  ajo  picado  con  especias  molidas,  agua 
y  doble  tanto  de  vino,  se  tapa  muy  bien  y  se  cuece.  Se  ador- 
na con  chiles,  aceitunas,  alcaparras  y  orégano  expolvoreado. 

1.112.  Coles  en  adobo— Se  pican  las  coles  y  se  ponen  á 
cocer;  ya  cocidas  se  enjugan,  se  muele  chile  ancho  con 
ajos  y  cominos,  se  fríe  muy  bien  y  se  le  agrega  caldo  de 
carne,  los  retazos,  costillas  y  chorizos,  garlianzos  cocidos 
y  limpios  en  poca  cantidad,  se  pone  la  cazuela  .con  mante- 
ca á  que  se  frían  las  coles  y  se  echan  en  el  adobo  á  que 
queden  espesitas.  Asi  se  hacen  en  especias  con  jitomate  y 
ajos  picados,  cebollas  gordas  y  cominos  molidos. 

1.113.  Coles  en  tocino. — Lávense  coles  cortadas  en  cuar- 
terones, se  cuecen  un  cuarto  de  hora  en  agua;  córtese  en 
pedazos  el  tocino  de  corteza  y  se  une  oon  las  coles,  que  se 
sacan  un  momento  después,  y  se  echan  en  agua'fresoa,  se 
aprensan  y  se  ponen  á  oooer  juntas  con  el  tocino  y  la  car- 
ne que  se  quiera,  añadiendo  sal,  pimienta,  raíces,  perejil, 
cebolla  y  clavo:  después  de  cocidas  la  carne  y  las  ooles  se 
saean  de  la  salsa,  se  coloca  la  carne  en  el  platón,  se  cubre 
con  las  coles  y  se  adorna  oon  los  pedaoitos  de  tocino. 

1.114.  Coles  á  lo  castro. — Córtense  en  rodajas  delgadas; 
escáldense  en  agua  hirviendo  oon  un  poco  de  sal,  escú- 
rranse, piqúense  después  de  refrescadas;  hecho  esto,  se  po- 
nen al  fuego  en  una  cacerola  oon  manteca,  sal  y  pimienta; 
se  añade  harina,  que  se  esparce  por  encima  meneando 
siempre  la  col,  se  lea  añade  caldo  del  puchero,  se  menea 


832 

siempre  y  so  dejan  oooer  hasta  que  la  falta  disminuya  lo 
suficiente. 

1.115.  Coles  con  leche. — Prepárense  en  un  todo  owno 
las  anteriores;  toda  la  diferencia  está  en  añadirles  leche 
en  lugar  de  caldo. 

1.116.  Colee  dé  Bruselas—  Quítense  las  hojas  unarillas  y 
pónganse  á  cocer  en  agua  y  sal;  refresqúense,  y  después  de 
bien  escurridas  se  sirven  sobre  un  trozo  de  mantequilla 
con  sal  y  pimienta. 

1.117.  Coles  rellenas. — Hágase  cocer  en  agua,  durante 
nn  cuarto  de  hora,  una  col  bien  limpia  y  lavada;  póngase 
después  en  agua  fria  y  déjese  enfriar,  se  quitan  las  hojas 
una  por  una,  se  rebozan,  y  se  vuelven  á  colocar  como  si 
estuviese  entera,  sujetándolas  con  una  cuerda;  se  vuelve  á 
cocer,  después  de  frío  se  quita  el  caldo,  se  la  exprime  lige- 
ramente para  que  suelte  la  grasa,  y  se  pone  en  el  platón 
bien  entera  6  partida  por  el  medio;  por  encima  se  echa  un 
caldo  colado,  una  salsa  española,  6  bien  mantequilla  y  ha* 
riña  desleída  en  el  caldo  en  que  se  ha  cocido  la  coL 

1.118.  Calabaza  rehogada. — Cortada  en  pedazos  creci- 
dos, se  ponen  en  una  olla  con  cebolla  frita,  perejil,  hojas 
de  yerbabuena,  sal  y  jitomates,  dándoles  vueltas  hasta  que 
se  rehoguen;  si  se  cociesen. con  agua  y  sal,  se  les  adere» 
con  aceite  crudo  y  pimienta. 

1*119.  Calabazas  en  guisado. — Se  pela  y  corta  en  peda- 
zos cuadrados  e*  iguales,  y  ne  cuecen  en  agua  oon  sal  y  nn 
poco  de  mantequilla,  se  pone  en  seguida  en  una  cacerola 
con  mantequilla,  perejil  picado,  sal  y  pimienta  y  se  deja 
hervir;  cuando  se  haya  consumido  la  mantequilla  se  des- 
líen yemas  de  huevo  en  nata  ó  leche  y  se  une  á  la  calabaza. 


338 

Entre  la  calabaza  chica  y  la  grande  no  hay  más  diferen- 
cia que  la  primera  está  mejor  en  el  puchero;  por  lo  demás 
pueden  aderezarse  igualmente. 

1.120.  Calabaza  atada. — Se  cojen  las  pequeñas  y  se  cor- 
tan al  través;  pónganse  en  una  cazuela  con  aceite  crudo, 
perejil,  pimienta  y  zumo  de  agraz  ó  unas  gotas  de  vina- 
gre, y  se  asan  entre  dos  fuegos. 

1.121.  Calabacines  rellenos. — Se  le  corta  el  rabo  y  coro- 
nilla, y  con  un  mediador  se  taladran  por  medio  para  qui- 
tarles la  tripa,  metiendo  en  el  hueco  el  relleno,  que  se  ha- 
ce con  ocho  huevos  por  cada  libra  de  carne  picada  y  sazo- 
nada con  ajos,  perejil,  pan  rallado,  etc.  Luego  se  ponen  á 
cocer  dos  horas  con  el  caldo  que  habrá  sobrado  de  la  carne 
picada  ó*  del  puchero,  cuidando  que  no  se  deshagan,  y  des- 
pués de  cocidos  se  les  echa  salsa  de  avellanas  con  un  poco 
de  pan  tostado  y  remojado;  huevos  y  especias,  meneando 
la  cazuela  para  que  no  se  socarren,  y  se  sirven  calientes. 
Para  el  picado  es  buena  la  carne  de  ave,  salchichón,  y  muy 
particularmente  la  pechuga  de  gallina. 

1.122.  Calabacitas  rellenas. — Después  de  cocidas  se  par- 
ten por  la  mitad,  se  les  sacan  las  tripas  y  éstas  se  revuel- 
ven con  pan  rallado,  un  poco  de  queso,  sal,  un  polvo  de  cla- 
vo y  aceite;  ya  revuelto  esto  se  rellenan  las  calabazas,  se  po- 
nen en  una  tortera  untada  con  manteca,  y  á  cada  una  se  le 
echa  un  poco  de  huevo  batido  por  encima;  se  ponen  á 
dos  fuegos  hasta  que  el  huevo  está  dorado,  y  se  sirven  secas, 

1.123.  Otras  calabacitas  rellenas. — Cocidas  las  calabaci- 
tas se  les  saca  una  ccronita  y  las  tripas,  lo  que  puede  ha* 
cerse  también  antes  de  cocerlas.  Se  pica  muy  bien  carne 
de  puerco  que  esté  á  medio  cocer,  se  les  revuelve  un  poco 


334 

da  pan  molido,  oUto y  pimienta  molida,  tres  6  cuatro  hue- 
vos, perejil  picado,  y  con  todo  aato  revuelto  aa  rellenan  las 
calabaza*  y  aa  van  poniendo  en  una  cazuela  untada  da  man- 
teca y  á  doa  f  uegoe,  haata  que  estén  dorada*.  El  caldo  aa  ha- 
ca con  tomate»  colorado*  molido*  deepuee  da  bien  fritos,  aa 
añade  cebolla  menuda,  ajoa  picado*  y  perejil,  un  poco  da 
vinagre,  pimienta  y  clavo*  molido*.  Eata  oaldo  aa  echa  en- 
cima de  la*  calabacita*,  que  ae  ponen  á  hervir  poco  á  poco. 

1.124.  Cebolla  en  enastado. — Tornen**  oabollaa  picada* 
y  bien  blanca*,  córtese  la  cabeza  y  al  rabo,  sin  despelle- 
jarla* de  otro  modo,  ouézanae  en  caldo,  daapuaa  da  coci- 
da* aa  colocan  en  la  ensaladera  y  ae  aaaonan  como  cual- 
quiera otra  ensalada. 

1.125.  Cebolla*  en  vinagre. — Se  limpian  quitándolas  al 
rabo  y  la  cabeza;  ae  ponen  tres  días  en  bastante  sal;  se  sa- 
can del  agua  que  hayan  arrojado,  ae  ponen  en  un  bota  da 
cristal  con  bastante  vinagre,  yerbea  y  pimienta;  se  tapa  ej 
bote  teniendo  cuidado  de  que  no  lea  entre  el  aire  y  aa  da- 
jan  aaí  ocho  día*  paaadoa  lo*  cuales  podráu  ya  comerse. 

1.126.  Cébcüa»  rellenas. — Se  haca  el  picado  da  carne 
magra,  tocino  gordo,  ajoa,  perejil,  cebolla  frita,  pan  ralla- 
do, sal,  piñonea,  especias  y  un  poco  de  queso  rallado;  daa- 
puaa ae  quitan  con  un  cuchillo  loa  casco*  interiore*  de  las 
cebollas  y  se  van  rellenando;  poniéndolas  en  el  puchero 
ain  que  estén  oprimidas,  se  cuecen  y  ae  sirven. 

1,127-  Cebolla»  asadas. — Córtense  á  las  cebolla*  ambo* 
extremo*,  y  quítense  la*  penca*  que  están  encima,  ponién- 
dola* en  una  cazuela;  en  ella  ae  echa  aceite,  un  poco  de 
azúcar,  un  grano  de  pimienta  y  un  polvo  de  canela  molidas 
póngase  á  aaar  á  fuego  maneo,  cúbrase  la  cazuela  con  una 


335 

cobertera  de  hierro  y  unas  ascua»  por  encima,  hasta  que 
están  bif  n  doradas. 

1.128.  Cebolla»  estofadas.— Se  frien  retazos  de  carne  de 
puerco  6  de  ternera  en  una  ollita  y  allí  se  echa  jitomate* 
asados  y  molidos  con  clavo,  canela  y  pimienta;  se  fríe  todo 
muy  bien  y  ya  que  está  muy  refrito  se  echan  las  cebollas 
grandes  á  que  se  den  una  sancochada;  se  les  echa  agua  pa- 
ra que  se  cuezan  y  vinagre;  se  les  saca  la  carne  y  se  sirve. 

1.129.  Acederas. — Se  ponen  astas  con  huevos,  con  algu- 
nos pescados,  y  sobre  todo,  con  la  carne  de  ternera  puesta 
en  una  cacerola;  para  aquellos  usos  se  componen  del  mo- 
do siguiente: 

Se  lavan  bien  las  hojas  de  acederas,  quitándolas  antea 
los  tronceos;  se  las  deja  una  6  dos  horas  en  agua  fresca,  y 
después  se  sacan  y  secándolas  se  pican  menudamente  con 
un  cuchillo  sobre  una  tabla.  En  seguida  se  ponen  en  una 
cacerola  con  buena  mantequilla  6  aceite  de  olivas,  sal,  pi- 
mienta negra,  perejil  y  cebollas,  todo  perfectamente  pica- 
do. Luego  que  esté  frita  se  retira  del  fuego  y  se  sirve  con 
los  platos  ya  dichos,  en  la  inteligencia  que  con  todos  esta- 
rá gustosísimo. 

1.130.  Acederas  en  jxigo.-  -Piqúense  muy  menudas  las 
acederas,  añádase  un  buen  puñado  de  perifollo  y  acelga 
blanca,  también  picadas,  póngase  todo  á  cocer  en  agua  y 
un  poco  de  sal.  Cuando  está  cocido  se  sacan  y  escurren 
bien;  en  seguida  rehogúese  en  la  cacerola  con  manteca 
proporcionada  á  su  cantidad;  se  expolvorea  con  harina,  sin 
cesar  de  menearlo,  y  se  humedece  con  caldo  de  sustan- 
cias, jugo  de  vaca  6  cualquiera  otro  caldo.  Cuando  haya 
cocido  un  cuarto  de  hora  se  pone  en  el  platón,  y  encima  lo 


336 

que  mejor  parezca,  sean  pedazos  de  huevos  duro»,  huevo* 
estrellados,  carnet  ó  cortezas  de  pan  fritas. 

1.131.  Acederas  en  leche. — Preparadas  como  la  anterior, 
fríanse  igualmente  en  mantequilla.  Rómpanse  aparte  une 
6  dos  huevos,  según  la  cantidad  de  ellas,  mézclese  con  ha- 
rina añadiendo  otro  huevo,  deslíase  el  todo  en  leche,  en  se- 
guida se  echa  esta  mesóla  en  las  acederas,  que  se  revuelve 
bien  para  que  la  mezcla  sea  completa.  Después  de  cocida  co- 
mo la  anterior,  se  pone  en  el  platón  y  se  haoe  el  mismo  uso. 

1.132.  Frito  de  acederas. — Prepárense  huevos  batidos  y 
harina,  con  la  cual  se  rebosan  las  hojas  de  acedera  una  á 
una,  echándolas  acto  continuo  en  la  sartén,  que  se  tendrá 
preparada  de  antemano  con  aceite  6  con  manteca  muy  ca- 
liente; es  plato  tan  delicioso  como  sencillo  y  económico; 
para  servirlo  se  expolvorean  con  azúcar  molida. 

1.133.  Acelgas. — De  las  pencas  mayores  se  quita  la  teli- 
ta  y  se  cortan  en  pedacitos,  se  cuecen  con  sal,  y  después  de 
escurridas  bien  y  untadas  las  pencas  con  una  masa  de  huevos 
y  harina,  se  fríen  en  sartén,  sirviéndolos  con  azúcar  y  canela 

1.134.  Cuajado  de  acelgas,  espinacas  y  escarolas. — Coci- 
da cualquiera  de  estas  hortalizas,  y  después  de  bien  escur- 
rida el  agua,  se  colocan  en  una  cazuela,  poniendo  encima 
pasas,  azúcar  y  canela  en  proporción,  y  uno  6  dos  huevos 
batidos;  en  seguida  se  pone  á  fuego  lento,  cubriéndola  con 
una  tapadera  de  hierro;  poniendo  algunas  asouas  sobre 
ella;  cuando  se  ve  que  todo  está  trabado  y  unido  á  modo 
de  tortilla,  se  separa  y  sirve. 

1.135.  Espárragos.— Puestos  en  agua  los  más  tiernos  se 
cuecen  con  sal  á  la  mitad  ó  menos  de  agua,  se  echan  hue- 
vos para  que  se  cuajen  sin  ponerse  duros;  para  servirse  se 


337 

ponen  en  un  platón  con  poca  agua,  y  se  lea  echa  por  encima 
aceite  frito  con  ajos,  pimienta,  unaa  .especias  y  unas  gotas 
de  vinagre,  si  gustan.  También  se  sirven  los  espárragos 
solamente  cocidos  con  sal,  puestos  en  hacecillos,  acompa- 
ñando las  vinagreras. 

1.136.  Espárragos  al  aceite. — Se  corta  una  parte  de  lo 
blanco  á  todos,  igualmente  se  atan  en  un  manojo,  se  escal- 
dan en  agua  hirviendo,  después  se  pasan  al  agua  fría  y  lue- 
go se  cuecen.  Se  les  quita  después  toda  el  agua  y  se  ponen 
en  un  plato  en  un  solo  manojo,  y  se  sirven  con  las  vina- 
greras. 

1.137.  Espárrago*  á  la  salsa  blanca. — Se  preparan  y  ha- 
cen cocer  como  los  precedentes,  se  colocan  en  el  plato  en 
diferentes  manojos  y  paralelamente,'  las  cabezas  en  el  cen- 
tro.    Se  sirven  muy  calientes  con  la  salsa  en  la  salsera. 

1.138.  Espárragos  con  chícharos. — Se  escojen  los  mas  pe- 
queños, se  cortan  en  pedacitos  del  grandor  de  un  garbanzo, 
y  se  hacen  cocer  como  los  anteriores;  después  de  cocidos  se 
sacan  del  agua  hirviendo  para  ponerlos  en  agua  fría,  se  po- 
nen en  un  cedazo  para  que  suelten  toda  el  agua,  y  luego 
sobre  una  servilleta  limpia;  después  de  bien  secos  se  ponen 
en  la  cacerola  con  mantequilla,  sal,  pimienta  en  grano  y  un 
poco  de  azúcar;  se  ponen  en  un  fuego  vivo,  meneándolos 
sin  cesar,  se  expolvorean  ligeramente  con  harina  y  se  les 
añade  unas  gotas  de  agua  6  caldo;  un  instante  después  se 
retiran  del  fuego,  y  en  caliente  se  mezolan  con  dos  yemas 
de  huevo.  Se  sirven  rodeados  de  huevos  duros  en  lonjas, 
ó  bien  de  cortezas  de  pan  fritas. 

1.139.  Espárragos  en  salsa  blanca. — Se  atan  después  de 
lavados  on  manojitos  pequeños,  y  así  se  ponen  á  cocer  en 

LA  COCTSMKA  TOMLAXÁ. — TOM.  I. — 22. 


338 

agua  hirviendo  con  tal;  se  sacan  del  agua  antes  que  se  pon* 
gan  blandos,  y  se  sirven  calientes,  presentando  con  ellos 
una  salsa  blanca. 

1.140.  Espiliaau, — Es  preciso  prepararlas  lo  mismo  que 
las  acederas  hasta  ponerlas  en  la  cacerola,  en  la  que  se  pone 
la  sal  necesaria,  mantequilla  6  manteca  y  un  poco  de  pi- 
mienta negra;  cuando  están  cocidas  se  les  añade  un  poco  de 
crema  de  leche  y  se  las  pone  unos  pedacitoe  de  pan  frito  en 
aceite,  y  se  sirven  calientes. 

1.141.  De  otro  modo. — Cuando  están  fritas  las  espinacas 
con  solo  la  mantequilla,  se  las  añade  un  poco  de  leche,  la 
azúcar  necesaria  y  corteza  de  limón,  y  también  es  un  plat> 
delicioso  si  se  le  añade  un  poco  de  agua  de  flor  de  naranja. 

1.142.  Espinacas  en  leche. — Se  pelan  y  lavan,  secueceii 
en  agua  hirviendo  y  se  ponen  en  agua  fría,  se  pican  y  óchen- 
se en  la  cacerola  con  manteca,  sal,  pimienta  y  nuez  moscada 
en  polvo;  pónganse  en  la  hornilla  en  buen  fuego,  se  ex  pol- 
vorean con  un  poco  de  harina  y  se  humedecen  con  leche, 
acabándose  de  disminuir  con  un  buen  pedazo  de  manteca 
fresca;  se  sirven  rodeadas  de  cortecitas  de  pan  frita*  y  ca- 
lientes. 

1.143.  Espinacas  en  jugo.  — Solo  se  diferencian  de  las  pre- 
cedentes en  el  caldo,  que  en  lugar  de  ser  leche,  se  emplea 
caldo  del  puchero  ú  otro  en  defecto  de  éste;  háganse  de 
modo  que  no  estén  muy  claras.  Para  servirlas  se  les  añade 
caldo  colado,  y  también  carne  asada. 

1.144.  Ensalada  de  escarola. — Se  hace  en  general  con  solo 
aceite,  vinagre  y  sal;  pero  algunos  gustan  de  una  punta ~de 
ajo  machacado  en  el  vinagre,  de  que  ¿ste  vaya  mezclado  con 
un  poco  de  pimienta  y  miga  de  pan  para  espesar,  ó  finalmen- 


389 

te  jitomates  crudos,  picados  con  un  poquito  de  cebolla,  sal 
y  aceite. 

1,145.  Ensalada  de  lechugas. — De  ningún  modo  está  me- 
jor esta  ensalada  que  con  sal,  aceite  y  vinagre.  De  ordina- 
rio se  sirve  sin  aderezar,  para  que  cada  uno  lo  haga  i  su 
gusto. 

1,14C.  De  otro  modo. — Se  limpia  y^ava  bien,  y  se  pone 
en  la  ensaladera,  colocándola  lo  mas  artísticamente  que  se 
pueda  con  los  tronchos  cortados  en  cuarterones,  perejil  y 
yerbas  muy  finamente  picadas. 

1.147.  Lechugas  picadas  enjugo. — Quítense  todas  las  ho- 
jas duras  y  las  venas  de  las  mas  grandes,  lávense  bien.  Se 
blanquean  en  agua  hirviendo  con  un  poco  de  sal,  refresqúen- 
se en  agua  fría,  se  escurren,  exprimen  bien  y  se  pican  muy 
menudas.  Hecho  esto,  se  emplea  paro  cocerlas  el  mismo 
procedimiento  que  para  las  acederas  en  jugo. 

1.148.  Lechiigas  picadas  en  leche. — Prepárense  y  blan- 
quéense, piqúense  como  las  precedentes;  en  seguida  se  cue- 
cen  y  guisan  como  las  acederas  en  leche.  En  lo  generol  no 
so  las  pone  nada  por  encima. 

1.149.  Ensalada  italiana. — Esta  se  compono  de  varias 
hortalizas,  como  son  el  apio,  la  escarola,  achicorias,  lechu- 
gas y  de  varias  yerbas  para  guarnecerla,  como  perifollos, 
berros  y  otras  de  esta  clase,  y  se  añade  al  arbitrio  del  coci- 
nero. Se  le  echan  granos  de  granada  con  azúcar,  y  muchos 
guarnecen  el  platón  con  huevos  duros. 

1.150.  Ensaladas  cocidas. — Se  sirven  en  ensaladas  coci- 
das los  ejotes,  la  escarola,  la  coliflor,  lombarda,  etc.,  ade- 
rezadas con  aceite  y  vinagre,  y  á  algunas  les  está  bien  la 
pimienta. 


*40 

1,151.  Betabel — Se  cuecen  con  aguay-sal,  se  secan  des- 
pués y  se  pelan,  se  parten  en  rajitas,  y  se  sirven  con  aceite 
y  unas  gotas  de  vinagre  ó  con  una  salsa  de  nata  de  leche. 

1,162.  Betabel  estofado. — Después  de  raspado  y  limpiado, 
se  le  da  un  horror  con  agua  y  sal,  y  se  conserva  aquella 
agua;  después  pártase  en  ruedas  y  se  pone  á  rehogar  con 
cascos  de  cebolla,  aceite  y  unos  granos  de  pimienta,  anida- 
se después  un  poco  de  agua  encarnada  de  la  que  quedó,  y 
déjese  menguar  el  caldo  y  así  se  sirve. 

1.153.  Betabel  frito. — Después  de  darle  un  hervor  se  par* 
te  en  ruedas  y  se  rehoga  con  manteca,  perejil  y  pimienta; 
saqúese  y  pasada  una  hora  se  vuelve  á  refreír. 

1.154.  Betabel  en  ensalada. — Cuezase  en  poca  agua,  quo 
se  deja  consumir,  y  después  que  esté  cocido  se  saca  y  parte 
en  ruedas,  y  puesto  en  un  plato  se  sirve  en  frío  con  aceite, 
vinagre  y  unos  granos  de  sal  enteros. 

1.155.  Ejote»  en  jugo. — Cuando  estén  cocidos,  en  agua 
y  sal,  échense  hirviendo  en  la  cacerola,  mójense  con  una 
cucharada  de  jugo  de  vaca,  anidase  manteca,  perejil  picado, 
pimienta  en  grano;  ligúese  meneándolo  mucho  y  aprisa, 
añádase  zumo  de  limón  ó  agraz  y  sírvanse. 

1.156.  Ejotes  d  lo  paisano. — Derrítase  en  una  cazuela  un 
poco  de  manteca  con  perejil  picado,  y  pónganse  después  los 
ejotes,  que  deben  antes  cocerse;  menéese,  y  se  reduce  á  sal- 
sa, rociándolos  con  zumo  de  limón  ó  vinagre. 

1.157.  Ejotes  con  cebolla. — Rehogúese  en  manteca  una 
cebolla  picada,  polvoréese  con  harina"  y  se  añade  un  poco 
de  caldo,  y  reducida  la  salsa,  se  echan  los  ejotes,  ya  de  an- 
temano cocidos  con  sal. 

1.158.  Ejotes  rehogados. — Cuando  estén  bien  cocidos  se 


341 

escurren  y  rehogan  en  una  cacerola  con  aceite  y  sal;  des- 
pués se  les  pone  un  poco  de  caldo,  y  se  deslíen  en  él  antes 
dos  yemas  de  huevo. 

1.159.  Ejotes  verdes  en  salsa  de  huevos. — Se  derrite  en 
una  cazuela  un  pedazo  de  manteca  con  perejil  picado,  en 
que  so  pondrán  los  ejotes;  se  menea  y  reduce  la  salsa;  y 
antes  de  servirlos  se  les  añadirá  un  batido  de  yemas  de  hue- 
vo, desleído  con  el  sumo  de  un  limón  ó  un  poco  de  vinagre. 

1.160.  Ejotes  con  vino.— Se  cuecen  los  ejotes  como  se 
ha  dicho,  y  después  se  echa  un  poco  de  cebolla  en  manteca, 
hasta  que  empiece  á  tomar  color;  se  mezclan  los  ejotes  y  se 
humedecen  con  vino,  sazonándolos  con  sal  y  manteca. 

1.161.  Ejotes  á  la  francesa — Se  tendrá  cuidado  de  ele- 
girlos verdes  y  tiernos;  se  mondan  quitándoles  ambas  extre- 
midades, á  fin  de  levantar  los  filamentos  que  tienen  á  los  la- 
dos para  blanquearlos  en  agua  caliente  con  sal  y  á  un  fuego 
vivo,  y  cuando  están  á  punto  y  no  demasiadamente  cocidos, 
se  escurren  en  un  cedacillo.  Se  deslié  un  pedazo  do  mante- 
quilla mezclado  con  yerbas  finas  picadas,  sal  y  pimienta,  en 
donde  se  echan  los  ejotes  que  hayan  estado  por  poco  tiem- 
po en  agua  hirviendo.  Todo  esto  se  rehoga  en  una  cazuela, 
y  se  mezcla  en  seguida  el  grueso  de  una  nuez  de  mantequi- 
lla mezclada  con  harina  y  el  zumo  de  limón. 

1.162.  Ejotes  á  lo  bretón. — Cuezanse  como  los  preceden- 
tes, escúrranse,  pónganse  en  la  cacerola  con  algunas  cucha- 
radas de  puré  oscuro  de  cebollas  y  otro  tanto  de  española. 
En  defecto  de  española,  servirse  de  caldo  de  sustanc  aa^ó  de 
buen  caldo  de  puchero,  sal  y  pimienta;  saltéense  añadien- 
do un  buen  pedazo  de  manteca;  saltéense  de  nuevo  y  sír- 
vanse sin  que  se  enfríen. 


342 

1.163.  Ejote*. — Se  limpian  bien  y  te  cuecen  en  agua  has- 
ta que  están  perfectamente  tiernos.  En  seguida  se  les  quita 
el  agua  y  se  ponen  en  una  cacerola  con  aceite  de  oliva,  sal, 
pimienta  negra,  y  después  de  haberles  dado  unas  cuantas 
vueltas,  se  les  añade  un  poco  de  caldo  del  cocido,  y  desleí- 
das en  él  dos  ó  tres  yemas  de  huevo. 

1.164.  Ejote*  á  l>  casero. — Limpios  ya  les  ejotes  y  qui- 
tadas las  venas,  póngase  agua  y  sal  en  una  caldera,  hágase 
cocer,  y  pónganse  en  ella  los  ejotes;  cuando  estén  tiernos  se 
sacan,  se  dejan  escurrir  y  se  ponen  en  sgua  fría;  póngase  en 
seguida  manteca  en  la  cacerola, cuando  esté  hirviendo  échen- 
se los  ejotes,  sazonándolos  con  sal,  pimienta  y  perejil  pica- 
do; menéense  continuamente  y  sírvanse. 

1.165.  Ejotes  verdes  en  manteca  quemada. — Escúrranse 
bien  los  ejotes  después  de  cocidos;  sazónense  y  saltéense 
en  manteca;  pónganse  en  el  platón,  rociándolos  con  la  man- 
teca casi  quemada. 

1,106.  Ejotes  al  rojo. — Hágase  enrojecer  cebolla  en  man- 
teca; en  cuanto  tenga  buen  color  échense  los  ejotes  lim- 
pios, cocidos  y  escurridos  como  los  anteriores;  saltéense  y 
sazónense  á  buen  gusto;  saltéense  de  nuevo  para  que  tomen 
el  sazonamiento,  añádase  un  poco  de  agraz  ó  vinagre  y  sír- 
vanse. 

1,167.  Frijoles  blancos  d  la  provincial.  — Tómense  los  fri- 
joles, que  se  habrán  tetado  en  remojo;  pónganse  en  un  pla- 
tón de  barro  con  caldo,  cuatro  ó  cinco  cucharadas  de  acei- 
te, un  pedacito  de  manteca,  dos  cebollas  en  rebanadas,  pe- 
rejil picado,  una  pata  de  ganso  ó  carne  de  puerco  salada,  pi- 
mienta, sal  y  nuez  moscada;  hágase  cocer  por  espacio  de 


343 

cuatro  horas,  mas  ó  menos,  de  modo  que  cuando  lleguen  4 
estar  cocidos  se  encuentren  ligados  á  punto. 

1,11)8.  Frijole*  blancos  fresco*  á  lo  casero. — Échense  en  agua 
hirvieudo  con  sal  y  un  poco  de  mantequilla;  refresqúense  á 
menudo  con  agua  fría;  cuando  estén  cocidos  escúrranse;  pón- 
ganse on  una  cacerola  con  un  buen  trozo  de  mantequilla,  sal- 
téense y  añádase  perejil  picado,  sal  y  pimienta,  y  un  poquito 
de  vinagre  ó  de  agraz,  y  aun  mejor  zumo  de  limou. 

1.169.  Frijoles  blanco*  á  la  romana. — Córtense  cebollas 
en  rebanadas  y  se  rehogan  en  aceite,  échense  los  frijoles 
con  perejil  picado,  sal  y  pimienta,  y  después  que  haya  todo 
cocido  un  rato,  se  ponen  en  un  plato,  y  sobre  ellos  échese 
un  poco  de  vinagro  hervido  antes  en  cazuela. 

1.170.  Frijol**  blancos.— *Se  cuecen  los  frijoles  blancos 
con  un  poquito  de  agua  de  tequesquite;  cuando  están  coci- 
dos se  lavan  mucho,  lo  mismo  que  la  olla  en  que  se  cocie- 
ron: en  la  misma  se  eclia  agua  limpia,  manteca  y  sal,  se  po- 
ne á  la  lumbre,  se  pica  bastante  jitomate  sin  pepita  y  un 
poco  de  cebolla,  se  echa  bastante  manteca  en  una  cazuela, 
se  hace  freír  la  cebolla,  luego  el  jitomate  y  en  seguida  los 
frijoles,  se  dejan  hervir  hasta  que  espesen  para  servirlos 
con  aceite,  chiles  en  vinagre,  etc. 

1.171.  Frijoles  prietos.  — Se  cuecen  sin  tequesquite  los  fri- 
joles prietos,  después  de  cocidos  se  vacian  en  una  cazuela; 
se  toma  una  sartén  ó  cazuela  y  se  fríen  con  bastante  man- 
teca y  todo  recaudo  de  cocina,  se  les  muele  clavo  y  canela, 
chiles,  aceitunas,  chorizos,  longaniza  y  un  poquito  de  vi- 
nagre. 

1.172.  Otros  frijoles  bayos. — Después  de  cocidos  se  lavan 
y  se  Jes  echa  una  poca  de  cebolla  frita,  chile  colorado  molí- 


344 

do,  unos  pedazos  de  pichón  y  otrot  de  pechuga  de  gallina; 
han  de  quedar  cargaditos  de  manteca,  después  se  les  echa 
un  poco  de  riño  de  Jerez. 

1.173.  Lenteja»  á  la  ama  de  cata. — Cuezanse  las  lentejas 
en  agua  un  poco  salada,  escúrranse  y  pónganse  en  una  ca- 
cerola con  un  buen  pedazo  de  manteca,  perejil  picado,  sal 
y  pimienta ;  saltéense  algunos  minutos.  Pónganse  en  el  pla- 
tón, adornándolas  con  cortezas  de  pan  frito,  y  sírvanse  muy 
calientes. 

1.174.  Lenteja»  á  la  mata* — Háganse  enrojecer  pedazos 
de  cebolla  y  yerbas  finas  picadas  en  mantequilla:  añádase 
harina;  cuando  la  masa  esté  hecha,  mójese  con  agua,  y  aun 
mejor  con  caldo,  échense  en  ello  las  lentejas  cocidas  en  agua 
y  escurridas  como  las  anteriores;  añádase  sal  y  pimienta, 
saltéense  lo  mismo  y  sírvanse. 

1.175.  Lenteja»  con  tocino  á  la  aldeana. — Pónganse  lente- 
jas y  un  buen  pedazo  de  jamón  en  una  olla  llena  de  agua, 
háganse  cocer;  cuando  estén  guísense  como  las  anteriores  y 
pónganse  en  el  platón  sobre  el  jamón  en  que  se  han  cocido. 

1.176.  Lenteja»  con  perejil — Se  cuecen  en  agua  y  sal,  se 
escurren  y  ponen  después  en  una  cacerola  con  manteca  abun- 
dante, perejil  picado,  sal  y  un  poco  de  pimienta,  rehogúese 
algunos  minutos  y  se  sirven  con  cortezas  de  pan  frito,  todo 
muy  caliente. 

1.177.  Lenteja». — Se  ponen  á  cocer,  y  ya  que  están  coci- 
das se  pica  bastante  jitomate,  cebolla  y  ajo;  se  fríe  este  re- 
caudo en  manteca  y  aceite  con  unos  chuchóte*  huauchinan- 
gos  rajados,  hasta  que  se  refría  mucho;  entonces  se  le  echa 
una  cucharada  de  vinagre  y  un  pedacito  de  azúcar,  se  le 
agrega  un  poco  de  apio  picado  para  que  se  fría  con  el  recau- 


345 

do;  ya  que  está  consumido  el  vinagre  se  le  echa  un  chile 
ancho  remojado  y  molido  con  unas  pimientas;  se  deja  que 
se  fría  y  allí  se  voltean  las  lentejas  y  se  dejan  sazonar. 

1.178.  Jitomates  rellenos. — Se  les  quita  á  los  jitomates  la 
tapita  de  encima,  se  les  saca  lo  de  adentro  y  so  pica  cebolla, 
caree  de  ternera,  jamón  y  perejil;  se  revuelve  todo  y  se  frie 
bien :  con  esto  se  rellenan  los  jitomates.  Se  unta  una  torte- 
ra 6  sartén  con  manteca  y  se  van  poniendo  los  jitomates  ya 
rellenos,  lo  sobrante  del  picadillo  con  un  poco  de  pan  ralla- 
do se  les  echa  por  encima,  agregándoles  un  poquito  de  cal- 
do y  se  oueoen  á  dos  fuegos. 

1.179.  Jitomates  rellenos. — Se  quita  el  cabo  de  la  parte 
superior  al  jitomate  para  extraer  las  pepitas  con  una  cucha- 
ra de  cafó,  y  se  exprime  el  agua  que  contiene  con  una  pre- 
sión ligera  con  los  dedos;  se  llena  de  una  pasta  compuesta 
de  perejil,  pepinos,  huevos  cocidos  duros  y  alcaparras,  todo 
picado  muy  finamente,  anchoas  en  pedacitos,  sal  y  aceite. 
Lleno  asi  el  jitomate,  se  envuelve  en  raspaduras  de  pan  y 
se  pone  en  un  hornillo. 

1.180.  Chícharos, — Se  toman  chícharos  tiernos  y  se  lim- 
pian, se  escaldan  y  cuecen  con  sal,  se  retiran  hasta  que  se 
vayan  á  servir,  en  cuyo  caso  se  les  pone  por  encima  pimien- 
ta y  aceite  crudo. 

1 .181.  Chícharos  coi»  jamón.  — Amásense  chícharos  verdes 
con  manteca,  échese  agua  por  encima,  y  déjense  así  un  ouar- 
to  de  hora;  mientras  éstos  están  así  en  remojo,  rehóguense 
en  una  cantidad  proporcionada  de  manteca  pedacitos  de  ja- 
món delgados,  escúrranse  los  chícharos,  pónganse  en  otra 
cacerola,  se  mojan  con  caldo  del  puchero,  de  sustancias  6 
con  española,  si  la  hay;  añádanse  los  pedacitos  de  jamón, 


« 

perejil  en  rama,  pimienta  en  grano,  y  un  poco  de  sal;  hága- 
se hervir  todo  en  mucho  fuego;  en  seguida  se  disminuye 
éste  y  se  deja  hervir  muy  lentamente  hasta  que  estén  au6- 
ci  en  temen  te  cocidos  y  que  la  salsa  esté  bastante  espesa;  se 
espuma,  <i-  .¿aita  el  perejil  y  se  sirve. 

1.182.  Chícharo*  á  la  cutera. — Se  toman  una  ó*  dos  libras 
de  chícharos,  se  lavan  y  se  amasan  en  una  cacerola  con  man- 
teca, se  añade  un  manojo  de  perejil,  cebollas  y  un  poco  de 
azúcar,  se  ponen  sobre  buen  fuego,  y  mójense  con  agua  de 
sal  clara  y  ligera:  cuando  ésta  naya  menguado  y  aquellos 
estén  cocidos,  se  quita  el  perejil,  se  retiran  del  fuego  y  se 
espesan  con  un  bueti  pedazo  de  manteca  y  un  polvito  de 
harina. 

1.183.  Chicliaros  á  la  inglesa. — Se  ponen  en  agua  hirvien- 
do, se  sazonan  con  sal  y  pimienta;  cuando  estén  cocidos  se 
escurren,  se  ponen  en  el  platón  con  un  buen  pedazo  de  man- 
tequilla, y  muchos  pedacitos  de  ésta  por  encima. 

1.184.  Chícharos  flamenco*. — Se  guisan  con  la  vaina  sin 
quitarlo  mas  que  los  extremos,  se  cuecen  y  rehogan  en  man- 
teca con  cebolla  picada  y  un  poco  de  pimienta. 

1.185.  Chícharos  en  azúcar. — Se  limpian  los  chícharos;  se 
pone  un  poco  de  manteca  en  una  sartén  y  se  fríen;  se  reba- 
na jamón,  se  hace  un  ramillete  de  perejil,  se  cojen  dos  ce- 
bollas y  dos  dientes  de  ajo  y  se  ponen  los  chicliaros  á  re- 
freír; ya  que  están  se  les  echa  media  cucharada  de  harina, 
luego  el  jamón,  las  cebollas,  el  ajo  y  el  perejil,  y  se  deja  re- 
freír bien;  se  les  echa  bastante  agua  para  que  cuezan  bien, 
con  un  poco  de  sal  y  cuatro  6  cinco  terrones  de  azúcar. 

1.186.  Chícharo*  en  mantequilla. — So  ponen  ú  cocer,  se 
toma  una  parte  y  se  muele,  se  cuela  por  una  servilleta,  lo 


&47 

colado  se  fríe  en  mantequilla  agregándole  sal,  pimienta  y 
agua  caliente;  cuando  está  sazonadu.se  le  incorporan  los  chí- 
charos enteros,  se  dejan  hervir  un  poco  y  se  les  deja  cal- 
dosos. 

1.187.  Chícharos  en  leche. — Se  cuecen  en  agua  hirviendo 
con  tequesquito,  se  consume  el  agua  por  caldera,  se  derrite 
mantequilla,  se  deshace  harina  en  leche  y  se  echa  en  los 
chícharos,  y  luego  la  leche  con  harina  y  sal. 

1.188.  Guisado  de  chícharo»  en  leche. — Se  cuecen  los  chí- 
charos en  una  cazuela  y  se  les  echa  manteca:  se  pican  ya 
que  están  cocidos,  se  les  echa  una  poca  de  harina,  no  á 
que  se  dore,  sino  que  se,  le  da  una  pasada  por  la  manteca, 
se  le  pone  leche  cocida  en  lugar  de  agua,  á  una  poca  de  pi- 
mienta en  polvo  se  le  echa  un  poco  de  agua  y  si  hay  propor- 
ción se  hace  con  mantequilla  y  en  el  caldillo  se  le  pueden 
echar  gajos  de  coliflor. 

1.189.  Guisado  de  chlcluxro*. — Después  de  cocidos  con  un 
poco  de  sal  blanca,  se  muele  la  tercera  parte  de  ellos  con 
un  poco  de  pimienta.  Esta  se  pone  á  freir  con  manteca, 
aceite,  cebolla  picada  fina  y  orégano.  Una  Tez  frito  se  le 
agrega  agua  y  sal  de  la  mar,  los  chícharos  enteros,  los  que 
después  de  sazonados,  se  dejan  enfriar  para  revolverles 
tres  yemas  de  huevo,  cuidando  de  que  no  se  haga  trozos  el 
huevo  al  calentarse. 

1.190.  (Jhiclxaros  en  carne. — Se  cuece  la  carne  con  agua 
y  vinagre  de  Castilla,  y  aparte  se  cuecen  ajos  pelados  en 
puro  vinagre.  Se  fríe  ajo,  cebolla  muy  menuda,  se  le  echa 
clavo,  canela,  pimienta,  orégano  en  polvo  y  un  poco  do  acei- 
te; en  esto  se  echa  la  carne  y  los  chícharos  ya  cocidos  y  se 
pone  á  sazonar. 


348 

1,101.  Haba*  verde*. — Después  de  cocidas  con  sal  se  cor- 
tan y  se  les  echa  aceite  .con  ajos  fritos;  se  machacan  ave- 
llanas tostadas,  se  tuesta  también  un  poco  de  pan,  se  pone 
en  remojo  en  agua  y  vinagre,  se  exprimen  bien,  se  muele 
con  pimienta  y  huevos,  se  echa  en  las  habas  y  se  deja  her- 
vir todo  junto. 

1.192.  Haba»  verdeé. — Guando  son  pequeñas  no  se  les  qui- 
ta sino  sus  extremos.  Cuando  son  grandes  se  despellejan 
enteramente  para  hervirlas  en  agua  y  sal;  después  se  esou- 
rren  y  se  les  echa  aceite  con  ajos  fritos;  se  hace  una  salsa 
con  avellanas  tostadas,  un  poco  de  pan  tostado,  mojado  en 
agua  y  vinagre,  pimienta  y  huevos  correspondientes  á  la 
salsa,  la  que  se  desleirá  con  agua  sazonada,  echándola  sobre 
las  habas,  y  que  den  un  hervor  á  fuego  manso. 

1.193.  Haba*  d  lo  castro, — Se  quita  la  vaina  y  se  cuecen 
en  agua  hirviendo  para  que  suelten  la  cascarilla; escúrranse 
y  dénseles  unas  vueltas  de  manteca  en  una  cacerola,  aña- 
diendo un  poco  de  harina;  mójense  con  caldo  del  puchero, 
y  además  se  añade  sal,  pimienta  y  ajedrea  picada.  Algunos 
momentos  después  se  ligan  con  yemas  de  huevo  y  un  poco 
de  azúcar,  meneando  el  todo  vivamente,  y  se  sirven. 

1.194.  Habas  hurtada*. — Se  cuecen  en  agua  con  sal,  des- 
pués se  pasan  á  la  agua  fría  para  que  estén  bien  verdes,  se 
escurren  y  acomodan  como  las  anteriores. 

1.195.  Haba*  fre*ca*  d  la  catalana — Se  cuecen  las  habas 
tiernas  con  todo  y  vaina  con  sal  y  un  poquito  de  tequesqui- 
te.  Ya  cocidas  se  escurren  y  enjugan  con  un  lienzo.  Des- 
pués se  bañan  en  harina  á  que  queden  cubiertas.  Se  fríe 
manteca  en  una  sartén  y  cuando  esté  ya  muy  caliente  se  van 
colocando  las  habas  separadamente  hasta  cubrir  el  fondo  de 


349 

la  sartén  y  se  les  echa  un  poco  mas  de  sal ;  se  voltean  hasta 
que  quedan  muy  doradas.  A  medida  que  se  vayan  sacando 
se  ponen  en  un  plato  hondo,  y  se  tapan  con  otro,  para  que 
no  se  pongan  frías  y  se  entiesen.     Son  muy  apetitosas. 

•  _  _ 

1.196.  Habas  tiernas  con  jatnrm  — Después  de  ¡teladas  las 
habas  verdes  se  ponen  d  cocer  con  sal.  Ta  que  están  coci- 
das se  escurren,  se  envuelven  en  harina  y  se  dejan.  En  la 
misma  manteca  se  fríen  lonjitas  de  jamón  y  ahí  se  echan 
las  habas,  se  les  agrega  sal  y  se  dejan  sofreír.  Se  sirven  ca- 
lientes. 

1.197.  Habas  secas, — Se  limpian  bien  las  habas  y  so  es* 
caldan  antes  de  echarlas  en  la  olla,  se  cuecen  y  se  les  quita 
la  espuma  porque  siempre  les  quedan  gusanillos.  Cuando 
hayan  cocido  se  machacan  unos  ajos,  pimienta,  azafrán  y 
un  manojo  de  yerbabuena  y  se  deslíe  todo  con  un  poco  de 
agua  caliente;  para  cada  cuatro  puñados  de  habas  se  echa 
uno  de  arroz  limpio,  se  sazona  con  sal,  se  revuelve  todo,  se 
aparta  del  fuego  y  se  deja  reposar  un  rato. 

1.198.  Zanahorias.— Se  cuecen,  se  rajan  y  se  ponen  en 
una  cazuela  con  cebolla  frita,  se  sazonan  con  tudas  especias 
y  sal,  cubriéndolas  con  agua  caliente.  Se  les  pone  dulce  de 
azúcar  ó*  miel,  6  bien  vinagre  (han  de  estar  ó  muy  dulces  6 
muy  agrias)  se  fríe  un  poco  de  harina  hasta  que  se  queme, 
y  se  deshace  con  el  caldo  de  las  zanahorias.  Después  se  les 
da  un  hervor  y  se  sirven  frías  6  calientes. 

1.199.  Zanahorias  en  salsa  blanca, — Se  raen  y  después  de 
lavadas  se  les  da  un  hervor  en  agua  caliente,  córtense  en  fi- 
letes y  se  ponen  en  una  cazuela  con  manteca,  pimienta  y 
perejil  picado,  y  después  de  bien  rehogadas  se  les  añada  un 


350 

poco  de  leche,  espesando  esta  salsa  con  yemas  de  huero,  un 
poco  de  asnear  y  canela. 

1.200.  Zanahorias  con  jitomate. — Después  de  cocidas,  se 
parten  en  filetea  y  rehogan  con  manteca,  perejil  y  cebolla 
picada,  un  poco  de  sal  y  pimienta,  y  se  echa  una  salsa  de 
jitomate  por  encima. 

1.201.  Zanahorias  en  verde. — Dispuestas  como  se  ha  di' 
cho  en  las  de  salsa  blanca,  se  echan  dos  cucharadas  de  ha- 
rina, un  poco  de  perejil  picado,  pimienta  y  sal,  y  cuando 
estén  rehogadas  añádanse  con  caldo,  salsa  de  perejil  y  agrio 
de  limón.  ' 

1.202.  Zanahorias. — Se  hacen  rajas,  después  de  mon- 
darlas bien,  so  cuecen  con  agua  y  sal,  se  ponen  en  una  ca- 
Buela  con  cebolla" frita,  se  sazonan  con  todas  especias  y  sal 
y  se  les  echa  agua  caliente  hasta  que  se  cubran:  se  les  pone 
azúcar  6  miel  y  vinagre  para  que  estén  dulces  y  agrias,  lue- 
go se  fríe  un  poco  de  harina  hasta  que  se  queme,  se  desha- 
ce con  el  mismo  caldo  de  las  zanahorias  y  se  deja  que  dé* 
todo  junto  un  hervor. 

1.203.  Zanahorias  guisadas.  —Después  de  bien  raspadas  y 
lavadas  se  escaldan  en  agua  hirviendo,  se  hacen  rajitas  y  se 
pasan  al  fuego  en  una  cazuela  con  un  trozo  de  manteca,  pi- 
mienta, sal'y  perejil  picado;  se  cuecen  humedeciéndolas  con 
leche  y  cuando  están  á  punto  se  traban  con  yemas  de  hue- 
vo. Si  se  preparan  para  comida  do  carne' se  echan  en  uní 
cazuela  con  lonjas  de  tocino,  perejil,  sal  y  pimienta,  se  mo 
jan  en  caldo  y  sustancias  y  cuecen  hasta  que  se  reducen  ca 
si  á  jaletina. 

1.204.  Otras. — Háganse  con  el  cuchillo  trozos  como  tapón 
citos  de  botella  y  ouázance  en  agua  con  sal  y  manteca.  Pon 


gnnse  on  una  cazuela  con  un  trozo  de  manteca,  perejil  y  ce* 
bolla  tierna  picada,  sal  y  pimienta  en  grano;  échense  las  za- 
nahorias después  de  escurridas,  se  fríen  un  poco  y  se  sirven. 

1.205.  Zanahorias  con  azúcar. — Se  cuecen  y  ^escurren ;  se 
pone  en  una  cacerola  un  trozo  de  manteca  y  dos  cucharadas 
de  harina,  se  humedecen  con  agua  ó*  caldo  después  de  echar- 
les sal,  y  cuando  el  caldo  está  espeso  se  echan  las  zanaho- 
rias y  se  agregan  dos  terrones  de  azúcar.  Be  dejan  hervir 
on  poco  y  se  sirven. 

1.206.  Calabacita*  divina*.  —Se  escojen  las  calabacitas  chi- 
cas, se  pican  menuditas,  se  lavan  muy  bien,  se  echan  en  una 
olla  con  un  poco  de  manteca,  se  muele  una  cebolla  y  un 
diente  grande  de  ajo  y  junto  con  esto  se  pone  á  cocer;  en 
seguida  se  muele  un  chile  verde  grande  y  un  poco  de  epa- 
zote: se  fríe  esto  con  uní*  pedacitos  de  longaniza,  en  bas- 
tante manteca,  ya  que  todo  esto  está  bien  frito,  se  voltean 
allí  las  calabacitas  y  se  dejan  sazonar  á  fuego  lento. 

1.207.  Calabaza  apaleada, — Para  que  salga  bien  es  preciso 
escogerla  pequeña  y  apalearla;  después  se  pone  en  una  ca- 
zuela con  aceite  crudo,  perejil,  pimienta,  sal  y  un  poco  do 
agrio,  ó  en  su  defecto  un  poco  de  vinagre;  se  pone  á  dos  fue- 
gos para  que  consuma  la  humedad. 

1,206.  Calabazas  cortadas. — Se  escojen  que  no  estén  muy 
recias  y  se  cortan  en  rebanadas  delgadas.  Se  ponen  en  el 
fondo  de  una  cazuela,  se  expolvorean  con  pimienta,  sal  y 
jitomates  picados,  quitándoles  antes  el  pellejo,  para  lo  cual 
se  ponen  sobre  las  brasas.  Después  se  colocan  otras  lonjas 
del  mismo  modo,  se  les  baña  de  aceite  crudo  y  se  ponen  á 
dos  fuegos.  Es  bueno  echarles  encima  pan  rallado,  un  poco 
de  yerbabuena  y  cebolla  cortada  muy  moñuda. 


352 

1.209.  Calabaza  rehogada. — Se  oorU  en  pedazos  grandes, 
se  pone  en  una  olla,  con  cebolla  frita,  ajos  majados,  pimien- 
ta, tal  y  jitomate;  te  da  vueltas  hasta  que  está  frito  y  se  le 
agrega  un  puñado  de  perejil  y  yerbabuena.  Se  les  aftade 
aceite  cocido  y  pimienta. 

1.210.  Calabaza  anisada.  —Cortada  en  trozos  se  hace  her- 
vir un  cuarto  de  hora  con  agua  y  sal  y  se  escurre;  se  echa 
en  una  cazuela  un  buen  trozo  de  manteca  y  se  fríe  en  ella, 
sazonándola  con  especias  y  sal;  hecho  esto  se  coloca  en  un 
plato,  cubriendo  los  pedazos  con  queso  rallado  para  que  to- 
men color,  poniéndolos  entre  dos  fuegos. 

1.211.  Calabacita»  rellenas.  —Se  esco jen  las  calabacitas 
mas  tiernas,  se  cuecen  un  cuarto  de  hora  en  agua  y  sal,  des- 
pués se  sacan  las  tripas  y  se  rellenan  con  lo  siguiente:  se 
empapa  miga  de  pan  en  leche,  se  exprime,  se  le  añaden  dos 
yemas  de  huevo  duras,  dos  onzas  de  queso  rallado,  cinoo 
almendras  peladas,  dos  clavos,  dos  yemas  de  huevo  batidas, 
sal  y  especias;  piqúese  y  mézclese  todo,  pásense  después  de 
bien  rellenos  por  manteca  y  se  sirven  con  algún  jugo. 

1.212.  Hongos. — Se  lavan  bien  para  que  no  sepan  á  tie- 
rra y  se  cuecen  en  agua  y  sal.  Ya  cocidos  se  escurren  y  fríen 
en  aceite,  y  á  medio  freir  se  les  echa  cebolla  picada  para 
que  acaben  de  f reine  con  ella;  se  ponen  en  una  cazuela,  se 
hace  salsa  de  avellanas,  se  les  echa  un  puñado  de  perejil, 
pimienta  y  yerbabuena  y  se  deja  que  todo  junto  dé  un  her- 
vor; si  no  se  quieren  con  salsa  bastará  la  cebolla. 

1.213.  Otros. — Lavados  y  cocidos  con  agua  de  sal,  se  ex- 
primen y  fríen  con  cebolla;  se  hace  una  masa  de  avellanas 
y  huevos,  se  le  añade  un  grano  de  ajo  y  todas  especias: con 


sos 

la  masa,  que  no  ha  de  quedar  espesa,  se  hacen  empanadas, 
echándoles  salsa  dentro  y  se  hacen  freír. 

1 .214.  Hongos  en  solví  de  pescado. — Se  ponen  á  freír  dien- 
tes de  ajo  y  un  pedazo  de  pan  en  aceite  y  manteca;  ya  que 
están  fritos  se  muelen  con  bastante  epazote;  se  fríe  todo  es- 
to en  bastante  aceite,  se  echan  los  hongos  que  estarán  ya 
cocidos  y  rebanados,  un  poco  de  sal,  pimienta  y  agua  para 
que  sazone. 

1.215.  Hongos. — Se  pone  una  cazuela  en  la  lumbre  con 
un  poco  de  aceite  de  comer  y  manteca;  allí  se  echan  unos 
dientes  de  ajo  á  que  se  doren  bien,  y  allí  mismo  se  echa  un 
puño  de  cebolla  menudita;  ya  que  está  bien  dorada  se  le 
echan  bastantes  rajas  de  chile,  así  que  ya  está  todo  bien 
frito  se  echan  allí  los  hongos  á  que  se  frían  también,  una 
rama  de  epazote,  un  poquito  de  agua,  su  sal  suficiente  y  mas 
aceite,  y  se  dejan  sazonar:  los  hongos  han  de  estar  curados 
con  ajo  para  ver  si  están  buenos. 

1.216.  Hongos. — Se  pica  ajo  bastante  muy  menudo  y  se 
pone  á  cocer  en  manteca  y  un  poco  de  agua;  ya  que  se  con- 
sume el  agua  y  queda  sola  la  manteca,  se  echa  una  cantidad 
como  la  tercera  parte  de  los  hongos,  de  cebolla  picada  y  se 
deja  que  se  cueza  en  aquella  manteca  (no  que  se  fría)  y  se 
echa  un  poquito  de  perejil  picado  menudo  y  los  hongos, 
que  ya  deben  estar  cocidos  y  muy  escurridos  para  que  no 
tengan  agua,  se  les  da  una  sancochada  nada  mas  y  se  les 
echa  un  poco  de  aceite  y  un  polvo  de  pimienta;  ya  se  tiene 
frito  aparte  un  poco  de  pan  molido  frito  en  aceite  y  se  le 
incorpora. 

1.217.  Hongos. — Se  les  quitan  los  rabí  tos,  se  lavan  y  se 
ponen  á  cocer  en  agua,  sal  y  unos  ajos  machacados;  se  fríe 

LA  OOOIVZRA  FOSLAXA. — TOM.  I. — 28. 


364 

ajo  y  cebolla  bastante  picada;  unas  pepitas  de  chile  y  dos  ó 
tres  ohiles  despedazados,  chilpotle  ó  patilla:  se  fríe  todo 
muy  bien,  y  cuando  ya  están  las  pepitas  color  de  oro  se  le. 
echa  bastante  epazote  picado  á  que  se  sancoche  nada  mas 
para  que  no  se  ponga  negro;  se  le  echa  agua  y  sal  y  se  deja 
sazonar  aquel  caldillo  que  debe  quedar  aguadito  y  después 
se  echan  los  hongos. 

1.218.  Otros  hongos. — Se  les  quitan  los  rabos  y  se  lavan 
como  los  anteriores;  se  ponen  en  una  olla  con  agua  suficien- 
te, dos  cabezas  de  ajo  machacadas,  dos  6  tres  chiles  mula- 
tos molidos  con  ajos  crudos,  según  la  cantidad  de  hongos, 
sal;  se  ponen  á  cocer  y  ya  que  casi  están  cocidos  se  sazonan 
con  una  poquita  de  masa  y  una  rama  de  epazote. 

1.219.  Cebollas  rellenas. — Limpíense  cebollas  de  las  más 
grandes  y  escáldense;  después  de  bien  escurridas  se  ahue- 
con  por  arriba  para  rellenarlas  con  lo  siguiente; 

Una  miga  de  pan  empapada  en  leche,  se  exprime  bien,  se 
le  añaden  dos  yemas  de  huevo  duro,  dos  onzas  de  queso  ra- 
llado, dos  clavos,  un  batido  de  dos  yemas;  se  pica  y  mezcla 
todo  muy  bien;  una  vez  lleno  el  hueco  so  enharinan  las  ce- 
bollas, se  bañan  con  yema  de  huevo  y  se  f rien ;  sírvanse  in- 
mediatamente bañándolas  con  salsa  de  jitomate  6  con  zumo 
de  limón;  pueden  bañarse  también  con  salsa  de  chile  verde. 

1 .220.  A  Iva-jones.  — Se  limpian ,  se  ponen  á  cocer  con  agua 
caliente  y  un  poco  de  tequesquite,  sin  mojarlos  de  ningún 
modo  con  agua  fria;  ya  que  estén  cocidos  se  les  echa  agua 
tibia  y  se  escurren  per  tres  veces  hasta  que  el  agua  quede 
muy  limpia.  Se  les  deja  poca  agua,  se  les  echa  una  cucha- 
rada de  manteca  con  un  poco  de  sal  y  se  sazonan  hasta  que 
queden  espesos. 


&55 

1,221.  Aceitunas  en  adobo. — Se  toma  una  docena  de  chi- 
les anchos,  se  desvenan  y  ponen  á  desflemar  para  que  no 
piquen;  después  se  muelen  en  seco  con  media  cabeza  de  ajo 
y  unos  pocos  de  cominos  con  la  sal  suficiente;  se  baja  esto 
del  metate  con  poquita  agua,  se  echa  todo  en  una  olla,  que 
no  sea  de  manteca,  con  aceite  español;  después  "se  'macha- 
can bien  las  aceitunas  de  modo  que  no  se  desbaraten,  se 
echan  en  el  chile  juntamente  con  unas  ruedas  de  cebolla  y 
se  dejan  así  por  tres  6  cuatro  dias,  se  adornan  con  «jueso 
añejo  y  orégano. 

1,122.  Salsifíes. — A  medida  que  se  van  raspando  y  lim- 
piando, se  echan  en  una  ensaladera  llena  de  agua  y  vinagre. 
Se  sacan  y  cuecen  en  agua  abundante,  haciéndoles  hervir 
con  un  poco  de  sal  y  una  cucharada  de  harina  y  huevo  ba- 
tido; se  fríen  y  se  dejan  dorar. 

1.223.  Garbanzos  turcos. — Después  de  cocidos  se  muele 
una  parte  y  se  tiene  prevenido  picadillo  y  rebanadas  de  ja- 
món; se  embarra  de  manteca  una  cazuela,  se  echa  la  mitad 
de  lo  molido  y  la  sal,  se  le  agrega  el  picadillo  con  los  gar- 
banzos enteros  y  las  rebanadas  de  jamón,  y  encima  la  otra 
mitad  de  lo  molido,  se  pone  al  fuego  y  se  baña  con  mante- 
ca  requemada. 

1.224.  Garbanzos  guisados. — Se  pone  á  cocer  garbanzo 
gordo,  y  ya  cocido  se  pela.  Se  muelen  unos  pocos  muy  re- 
molidos con  clavo  y  canela;  se  pica  jitomate,  cebolla  y  ajo, 
se  fríe  bien  y  se  le  incorpora  garbanzo  á  que  se  fría  con  el 
jitomate;  se  le  echa  caldo  de  carne  de  puerco,  costillas,  re- 
banadas de  jamón,  chorizos,  los  demás  garbanzos  enteros  y 
un  pedazo  de  azúcar  y  vinagre.  Se  adorna  con  chiles  en 
vinagre. 


366 

1.225.  Oarbanxot  comunes.  — Remójense  loe  garbanzos  con 
caldo  de  acelgas  6  espinacas  cocidas;  ya  remojados,  lavados 
y  escaldados,  se  cuecen  con  un  poco  de  aceite  crudo;  cuan* 
do  ya  están  cocidos  se  les  agrega  cebolla  frita  y  todas  espe- 
cias machacadas  con  unos  dientes  de  ajo;  se  sazonan  con  sal 
y  se  pueden  espesar  poniéndoles  una  sexta  parte  de  arroz; 
también  se  les  puede  añadir  salsa  de  avellanas  y  huevos; 
pero  lo  mas  acostumbrado  es  machacar  una  cucharada  de 
garbanzos  con  yemas. 

1 .226.  Chayóte*  — Después  de  cocidos  los  cnayotes  se  par- 
ten por  la  mitán  á  lo  largo,  se  les  quita  la  pepita  y  la  bolsa, 
y  con  una  cuchara  de  plata  se  raspan  de  modo  que  salga  la 
carne  y  queden  las  cascaras  enteras  como  j  i  cari  tas.  Para 
ocho  cnayotes  se  baten  diez  huevos,  primero  las  claras  y  lue- 
go las  yemas.  La  carne  de  los  chayotes  se  bate  bien  con  una 
cuchara  grande,  de  modo  que  quede  suave;  se  le  echa  el  hue- 
vo batido,  apartando  un  poco  menos  de  la  mitad,  un  poco 
de  mantequilla,  bastante  canela  molida,  bizcochos  tostados, 
bien  molidos,  sal  y  un  poco  de  azúcar.  Ya  bien  revuelto  to- 
do se  rellenan  las  cascaritas  de  los  chayotes  y  se  vnn  ponien- 
do en  una  tortera  untada  de  manteca,  y  se  echa  á  cada  uno 
un  poco  de  huevo  del  que  se  apartó,  extendiéndolo  bien  y 
se  ponen  á  dos  fuegos  hasta  que  el  huevo  de  encima  está 
cocido  y  dorado. 

1.227.  Berengenas  rellenas.  -*-Se  parten  por  la  mitad  á 
lo  largo.  Se  les  quita  parte  de  la  sustancia  interior,  dejan- 
do ompero  una  buena  porción  de  la  pulpa  adherida  á  la  piel, 
que  no  se  ha  de  estropear.  Separadamente  se  prepara  el 
relleno  siguiente: 

8e  pica  la  pulpa  con  médula  de  buey  é*  igual  cantidad  de 


857 

pechuga  de  gallina  ó*  carne  de  carnero  asado.  Se  mezclan 
unas  yemas  de  huevo  con  miga  de  pan  duro  muy  desme- 
nuzado y  se  une  este  relleno  con  el  primero  amasándolo  bien; 
se  le  añade  sal  y  nuez  moscada  rallada,  pero  no  mucha.  Con 
este  relleno  se  llenan  las  medias  berengenas;  uniendo  la  su- 
perficie con  un  poco  de  yema  de  huevo  que  se  pasa  con  las 
barbas  de  una  pluma.  Se  colocan  en  un  platón  que  se  pone 
sobre  la  lumbre.  Se  derrite  médula  y  con  ella  se  rocían  las 
berengenas.  Se  tana  el  platón  y  se  pone  lumbre  viva  en  la 
tapadera  y  lento  por  debajo.  Se  sirven  en  el  mismo  platón. 
1,228.  Bertmjeuu  frita». — Partidas  en  rodajas  6  en  tiras 
á  lo  largo,  so  les  abren  unas  incisiones  con  el  cuchillo  para 
que  penetre  el  jugo,  y  se  ponen  ¿  freír  después  de  echarles 
la  sal  correspondiente. 


ADVERTENCIA. 

Terminaremos  este  primer  tomo  con  algunas  prevenciones 
do  cocina,  economía  domestica,  reglas  de  urbanidad  y  bue- 
nas maneras,  y  el  Mono  de  servio,  la  mesa  y  trun-bar. 
En  el  tomo  segundo  daremos  los  guisos  mexicanos  y  todo 
lo  demás  que  debe  completar  nuestro  m  Tratad  o  de  Cocina." 

1.229.  Sopa*  y  cocidos. — Estos  deben  hacerse  á  fuego  len- 
to, pues  si  se  arrebata,  no  se  consigue  extraer  los  jugos  y 
queda  el  caldo  sin  sustaucias;  las  carnes  de  que  se  compon- 
ga deben  ser  frescas;  las  aves  y  algún  trozo  de  carne  de  car- 
nero realzan  mas  el  buen  gusto. 

1.230.  Sustancio*  yj'tgos. — El  caldo  colado  y  el  jugo  de 


35* 

1m  vianda»  son  la  base  de  todas  las  salsas,  y  lo  que  hace 
que  sean  mas  suaves  y  delicadas. 

1.231.  Carne  de  vaca. — La  mejor  es  do  color  encarnado 
oscuro,  con  vetas  de  pequeñas  fibras  blancas,  y  cubierta 
de  gordura;  para  el  cocido  debe  emplearse  la  del  pecho  y 
cuello. 

1.232.  Carne  de  ternera. — La  de  dos  meses  á  tres  es  la 
mejor,  pues  de  menos  tiempo  carece  de  sustancia,  y  si  pasa 
de  tres  meses  no  es  tan  buena. 

1.233.  Carne  de  carnero. — Debe  ser  de  un  rojo  subido, 
gorda  por  dentro,  y  si  se  quiere  que  esté  tierna,  debe  apo- 
rrearse un  poco  con  un  palo  corto. 

1.234.  Carne  de  cerdo. — La  mejor  debe  ser  firme,  consis- 
tente y  rojiza,  sin  sabor  desagradable  á  humedad,  ni  indi- 
cios de  lepra,  que  son  unas  manchitas  blancas  salpicadas; 
el  cerdo  mejor  es  el  de  siete  á  ocho  meses,  pero  para  la 
manteca  y  el  tocino  es  preferible  el  de  quince  meses;  los 
cerdos  viejos  tienen  la  carne  dura  y  correosa. 

1.235.  Carne  de  jabalí. — Esta  c%rne  es  muy  parecida  á  la 
del  cerdo;  pero  no  se  sirve  mas  que  la  cabeza,  lomo  y  cos- 
tillas; debe  majarse  mucho  con  un  palo  redondo  para  que 
salga  tierna. 

1.236.  Liebre. — Lasque  se  crian  en  las  montanas  son 
mejores  que  las  de  tierra  llana  y  pantanosa;  se  conoce  por- 
que las  primeras,  al  abrirlas  el  vientre,  despiden  un  olor 
agradable  y  aromático. 

1.237.  Conejo. — Si  fuere  casero,  se  destripa  y  se  le  llena 
el  vientre  de  tomillo,  salvia,  laurel,  expliego  y  albaliaca; 
después  se  le  hace  trozos,  y  se  le  pone  en  adobo  antes  de 
guisarlo. 


359 

1.238.  Perdices.  — La  perdiz  de  patas  encarnadas  es  mejor 
que  las  otras  que  las  tienen  pardas. 

1.239.  Codorniz. — Es  ave  de  paso,  muy  conocida  á  fines 
de  verano;  está  mas  gruesa  y  crasa  en  primavera,  y  es  exce- 
lente. 

1.240.  Pichones. — Pava  matarlos  bien  se  les  comprime  la 
entraña  para  que  no  derramen  sangre;  es  carne  muy  deli- 
rada y  nutritiva. 

1.241.  Aves  casera*. — Las  que  tienen  el  pellejo  delgado  y 
blanco  son  las  mejores:  tan  luego  como  se  les  mata  se  les 
despluma  y  destripa,  aplastándoles  el  esternón,  después  se 
chamuscan. 

1.242.  Pollos. — Los  que  están  gordos  y  cebados  con  gra- 
no se  destinan  para  asado;  su  buena  calidad  se  conoce  en  sn 
grasa  y  blancura  de  carne;  los  que  están  ñacos  son  buenos 
para  guisados. 

1.243.  Gallo  y  polla Ambos  son  excelentes  para  el  caldo 

de  los  enfermos  y  para  otros  diferentes  guisos,  para  sacar 
sustancias,  con  los  que  se  da  sustancia  á  las  salsas. 

1;244.  Qíiajohttt  y  pipila, — Se  prefiere  esta  última,  por 
que  es  mas  tierna  su  carne. 

1,245.  Bacalao.  —El  de  buena  calidad  debe  tener  la  carne 
blanca  y  el  pellejo  negro;  debe  tenerse  en  remojo  en  agua 
doce  horas  por  lo  menos. 

1,24(5.  Habas. — Las  mejores  deben  ser  pequeñas  y  tier- 
nas; cuando  se  cuecen  con  la  vaina,  deben  estar  un  cuarto 
de  hora  para  quitárseles  la  aspereza. 

1,247.  Frijoles. — Los  blancos  se  han  de  echar  en  el  agua 
cuando  haya  principiado  á  hervir,  que  debe  ser  á  fuego  muy 
vivo. 


360 

1.248.  Hongo*. — Muchas  persona»  han  sido  víctimas  da 
envenenamientos  por  este  vegetal,  en  especial  los  que  se  oo- 
jen  en  los  bosques.     Se  recomienda  mucho  su  elección. 

IMPORTANTES  PREVENCIONES. 

1.249.  Prtvencioru»  sobre  Uu  nutaiiciai  ettimulanUt  y  $al* 
mu.— -Los  estimulantes  se  emplean  para  excitar  el  gusto  y 
dar  acción  á  los  órganos  del  apetito,  que  sin  ellos  todo  se- 
ría insípido  é  insustancial.  Obtienen  el  primer  lugar  las  es- 
pecias de  Oriente  y  de  América;  después  entran  las  plantas 
aromáticas,  la  sal  y  cuanto  se  conserve  con  ella,  los  ácidos 
vegetales  y  las  plantas  apetitivas. 

La  pimienta  entre  las  especias  es  la  mas  común.  Entre 
los  mexicanos  se  usa  mucho  la  de  Tabasco,  que  es  menos 
acre,  mas  aromática  y  se  parece  mas  al  clavo. 

Por  pimienta  molida  6  negra  se  entiende  la  especia  pre- 
parada con  su  polvo  solamente  majada,  y  ésta  se  usa  para 
comer  los  ostiones,  sopas  y  ensalada. 

El  clavo  de  especia  después  de  la  pimienta  es  lo  que  mas 
se  usa.  Se  meten  en  una  cebolla  quemada  para  dar  color  y 
gusto  al  caldo:  se  usa  de  ellos  en  muchas  salsas  y  guisados, 
y  en  todos  los  intermedios  preparados  con  legumbres,  pues 
su  p3rfume  es  bastante  agradable  y  de  un  gusto  casi  gene- 
ral;  pero  es  necesario  sacarlos  antes  de  servir,  pues  su  olor 
es  el  que  agrada. 

La  nuez  moscada  también  es  parte  de  las  especias  que  de- 
ben hallarse  en  las  cocinas.  Se  eligen  las  mas  sanas,  que 
se  raspan  en  los  guisados  á  medida  que  se  necesitan.     Está 


361 

bien  á  todas  las  salsas,  con  particularidad  á  las  coliflores  y 
huevos.  La  flor  de  noscada,  que  no  es  otra  cosa  que  su  se- 
gunda corteza,  se  emplea  pocas  veces  en  las  salsas  y  guisa- 
dos; por  lo  regular  se  las  destina  á  los  intermedios  de  dul- 
ces, á  los  que  da  un  gusto  tan  fino  y  agradable  como  lo  ha- 
ria  la  misma  nuez. 

La  canela  no  se  emplea  tanto  en  la  cocina  como  en  los 
dulces  y  licores;  pero  puede  tener  algún  uso  en  ciertas  cir- 
cunstancias. La  de  Ceylan  es  la  mejor  y  la  única  que  se 
debe  emplear. 

£1  ajengibre,  raiz  de  una  planta  originaria  de  las  Indias 
y  de  América,  es  acre,  aromático,  ardiente,  y  de  un  olor 
bastante  agradable,  aunque  fuerte. 

Tal  es,  poco  mas  6  menos,  el  número  de  las  especias  que 
se  usan  en  la  cocina  reducidas  á  polvo  muy  fino,  del  que 
se  echa  la  dosis  conveniente,  que  varia  según  el  empleo 
que  quiere  hacerse  de  ellas;  siendo  estas  las  cuatro  especias 
que  conviene  usar  para  los  guisados,  á  fin  de  que  no  salgan 
demasiado  insípidos  6  sobradamente  aromáticos.  Sfguense 
después  los  estimulantes  que  crecen  naturalmente  en  nues- 
tros países,  ya  sean  arbustos,  plantas,  granos  6  raíces  de 

huerta. 

£1  primero  de  todos  es  el  laurel;  sus  hojas  aromáticas  sir- 
ven muy  á  menudo  para  perfumar  diferentes  guisados;  pero 
es  necesario  usarlo  con  mucha  sobriedad.  Se  conoce  otro 
laurel, '  llamado  de  cereza,  del  cual  no  se  usa  sino  para  dar 
á  la  leche  el  gusto  y  olor  de  las  almendras;  pero  como  debe 
esta  propiedad  al  ácido  prúsico,  veneno  el  mas  violento,  de- 
be usarse  en  muy  pequeña  dosis,  y  lo  mas  una  ó*  dos  hojas, 
siendo  lo  bastante  para  poco  menos  de  un  cuartillo. 


i 


362 

El  tomillo  entra  también  entre  los  adherentes.  Su  olor 
fuerte  y  demasiado  aromático  impide  que  se  use  en  grandes 
dosis. 

La  mejorana,  planta  muy  aromática,  tiene  un  olor  tan 
fuerte  como  el  tomillo,  y  da  los  mismos  resultados. 

La  ajedrea,  cuyo  uso  no  es  tan  común  como  el  del  tomi- 
llo, tiene  poco  mas  6  menos  sus  propiedades. 

La  ajedra  y  mejorana  se  usan  frescas;  el  laurel  y  tomillo 
se  conservan  durante  mucho  tiempo,  pues  aun  secos  no 
pierden  su  sustancia  aromática. 

Deben  contarse  entre  estas  diversas  sustancias  aromáti- 
cas  el  estragón,  perejil,  yerbabuena,  perifollo,  apio,  cebolla 
y  ajo;  pero  ounque  no  se  les  considera  como  particularmen- 
te llenos  de  un  aroma  capaz  de  estimular  los  órganos  de  la 
digestión,  no  obstante  esto  son  inexcusables  entre  todas  las 
preparaciones  alimenticias,  especialmente  el  perejil,  que  ca- 
si es  de  primera  necesidad,  y  no  hay  guisado,  por  mas  sim- 
ple que  sea,  en  que  no  se  emplee.  Lo  mas  esencial  para  to- 
dos los  que  están  encargados  de  las  cocinas  es  no  abusar  de 
los  estimulantes,  que  pudieran  ser  muy  nocivos,  principal- 
mente á  las  personas  delicadas. 

1,260.  Prevenciones  para  los  fritos. — Se  da  este  nombre 
al  aderezo  de  toda  especie  de  viandas,  peces,  legumbres  y 
frutas,  echo  en  una  sartén  por  medio  del  aceite  ó  de  la 
manteca;  frecuentemente  se  usa  de  ¿1,  tanto  para  variar 
los  alimentos  cuino  para  aprovechar  una  inñnidad  de  piezas 
que  se  habian  de  desechar. 

£1  frito  se  compone  de  diferentes  sustancias,  y  por  lo 
común  se  hace  con  manteca  y  con  aceite  el  mas  6no  y  deli- 
cado. Debe  disponerse  todo  de  antemano  para  hacerlo  con 


363 

un  grado  de  calor  suficiente  por  medio  de  un  fuego  activo  6 
moderado,  según  se  necesite.  La  pasta  de  freír  se  hace  con 
harina  de  flor,  yema  de  huevo,  un  poquito  de  Aguardiente 
y  corta  cantidad  de  aceite.  Debe  ser  ligera  y  de  una  consis- 
tencia regular,  que  no  esté  demasiado  espesa,  y  hecha  con 
dos  horas  de  anticipación. 

£1  aceito  ó*  manteca  debe  estar  hirviendo  al  echar  las  sus- 
tancias para  f  reirso. 

1,251.  Otro  modo  de  preparar  un  buen  frito. — El  mejor 
de  todos  es  el  que  se  obtiene  on  la  grasa  del  puchero,  aun- 
que puede  suplirse  con  la  gordura  de  los  ríñones  do  vaca, 
muy  picada  y  derretida.  Puede  realzarse  su  calidad,  co- 
ciéndola y  purificándola  después.  Se  echa  en  una  olla  pues- 
ta al  fuego,  se  hace  hervir,  se  espuma  y  se  vierte  después 
por  decantación,  ó  sea  inclinando  la  olla,  con  cuya  manió- 
bra  se  obtiene  clara  y  trasparente. 

Este  frito  es  preferible  al  que  se  prepara  con  manteca, 
que  tieue  el  defecto  de  reblandecer  las  masas,  de  hincharse, 
levantar  espuma  y  derramarse  fuera  de  la  sartén,  lo  que  es 
muy  perjudicial.  £1  aceite  adolece  de  los  mismos  inconve- 
nientes, aunque  no  ablanda  las  pastas;  los  mismos  defectos 
ofrece  la  manteca  derretida,  que  es  además  cara  en  las  ciu- 
dades. 

Deben  tenerse  siempre  aparte  dos  clases  de  fritos,  uno 
para  los  pescados  y  otro  para  Jo  demás  quo  ocurra. 

Cuando  haya  de  hacerse  uso  de  algún  frito,  se  calienta  la 
grasa  en  la  sartén,  se  moja  el  dedo  en  agua,  y  si  sacudién- 
dolo dentro  no  chisporrotea,  es  prueba  de  que  está  en  punto. 

Si  es  pescado  el  que  se  va  á  freir  se  coje  por  la  cabeza,  y 
antes  de  soltarlo  se  meto  la  cola  de  manora  que  quede  bien 


1*4 

bañad»,  y  ni  al  cabo  de  un  segundo  aparece  casi  quebradiza, 
déjese  caer  el  pescado  cuidando  de  volverlo  cuando  esté*  á 
medio  freír.  Excusado  es  prevenir  que  antes  de  freír  el  pea* 
cado  debe  destriparse  después  de  escamado  y  bien  lavado, 
désele  algunos  cortes  con  el  cuchillo  y  rebócese  después  con 
harina.  Luego  que  está  frito  se  envuelve  en  un  lienso  para 
que  escurra  la  grasa  y  se  sirve  polvoreándole  con  sal  molida. 

No  se  dejará  el  frito  sobre  el  fuego  después  de  haber  ser- 
vido, porque  ennegrece.  El  fuego  durante  la  operación  debe 
ser  de  llama,  porque  si  no  está  caliente  en  debido  punto  lo 
que  se  fría,  no  saldrá  consistente  ni  dorado,  ó*  cuando  me- 
nos absorverá  mas  grasa  de  la  necesaria  y  lo  hará  desagra- 
dable al  gusto.  Se  sacarán  de  la  sartén  las  cosas  que  se  frían 
luego  que  hayan  tomado  un  hermoso  color;  se  pondrán  á 
escurrir  sobre  un  trapo  ó*  colador  y  se  sirve  encima  de  una 
servilleta  doblada  sobre  un  papel  sin  cola,  si  no  es  el  convi- 
te da  etiqueta.  Déjese  enfriar  el  frito  sobrante  y  se  vuelve 
á  echar  en  el  jarro  todo  lo  claro,  pero  no  la  grasa  del  fondo. 

Si  durante  la  operación  se  derramase  algo  del  frito  por 
el  fuego  se  apagará  echando  ceniza;  mas  si  se  inflamase  en 
la  sartén,  se  tapará  inmediatamente  con  una  cobertera  6  un 
lienso  humedecido  en  agua. 

1,252.  Prevenciones  para  los  asados. — Lo  primero  que  de- 
be observarse  para  que  los  asados  queden  á  punto  es  pro- 
porcionar la  cantidad  del  fuego  á  la  calidad  de  las  carnes. 
La  vaca  y  el  carnero  exigen  un  fuego  vivo,  pero  sin  preci- 
pitar su  acción,  y  disminuyendo  por  grados  el  calor.  Como 
en  estas  dos  clases  de  carnes  es  esencial  que  conserven  todo 
su  jugo,  es  preciso  evitar  que  se  sequen  en  el  asador,  hu- 
medeciéndolas frecuentemente  con  grasa. 


36o 

La  vaca  exige  menos  fuego,  y  es  necesario  rociarla  y  un* 
tari»  mas  á  menudo  con  la  grasa,  y  nunca  debe  servise  con 
sengre  pues  sería  nial  sana.  Para  asegurarse  si  está  en  pun- 
to, se  le  pica  con  una  aguja  gruesa,  profundizándola  hasta 
el  hueso,  y  si  el  jugo  que  sale  por  la  picadura  está  limpio  6 
sanguinolento,  en  este  caso  se  deja  la  pieza  en  el  aaador,  pe» 
ro  no  debe  repetirse  á  menudo  esta  operación  para  que  no 
se  desperdicie  el  jugo  por  la  picadura. 

Para  que  las  aves  están  tiernas  y  delicadas,  se  ha  do  tenor 
presente  que  la  que  sirva  para  el  mediodía  debe  matarse  la 
víspera,  y  la  que  ha  de  servir  por  la  noche,  puede  matar* 
se  por  la  mañana  muy  temprano;  es  necesario  templarla  en 
agua  hirviendo  y  desplumarla  allí  mismo  mientras  puedan 
aguantarla  las  manos.  Hay  otro  modo  de  conserrar  la  ter- 
nura de  las  aves,  y  es  hacerlas  tragar  una  cucharada  de  vi- 
nagre  un  poco  antes  de  matarlas.  Las  aves  son  mas  tiernas 
cuando  han  sido  ahogadas  qne  euando  se  las  hace  sangrar. 
Si  se  les  corta  la  cabeza,  ha  de  ser  cuando  ya  están  frias. 

Nada  mas  insípido  que  una  ave  consumida  al  fuego  y  que 
ha  perdido  todo  su  jugo,  de  modo  que  si  se  expusiera  á  un 
fuego  vivo,  como  la  vaca  y  carnero,  el  pellejo  se  quemaría 
y  perdería  uno  de  sus  mejores  atractivos.  Para  evitar  este 
inconveniente,  téngase  la  precaución  de  envolver  en  un  pa- 
pel las  aves  y  frotarlas  con  manteca  6  aceite.  Se  las  quita 
después  el  papel,  se  rocían  con  la  grasa  y  se  exponen  por 
algunos  instantes  al  fuego  vivo,  que  es  lo  que  se  necesita 
para  dar  color  al  pellejo  y  hacerle  reluciente,  así  como  á  las 
cortezas  de  tocino. 

En  cuanto  á  las  aves  grandes,  tales  como  los  gansos  y  pa- 
tos, atendida  la  dureza  de  su  pellejo  se  pueden  poner  sin 


366 

inconveniente  á  un  fuego  vivo,  y  se  conoce  cuando  están  en 
punto  por  el  humo  que  despiden.  £1  cordero  debe  ser  tra- 
tado como  las  aves. 

Para  los  bifttek*  y  otras  carnes  preparadas  en  parrillas, 
todo  el  arte  consiste,  especialmente  para  la  vaca  7  carnero, 
en  que  sufran  un  fuego  vivo,  pues  solo  por  este  medio  se 
ooucentran  los  jugos.  Ha  de  tenerse  especial  cuidado  en  no 
dejarlos  cocer  ni  consumir  demasiado,  y  no  volviéndolos 
mas  que  una  vez. 

Para  mayor  inteligencia,  presentamos  un  cuadro  detalla- 
do del  tiempo  que  cada  piesa  debe  estar  al  fuego,  calculan* 
do  que  este  sea  vivo. 

HORAS. 


Vaca  en  un  peso  de  5  libras H 

Venado  en  un  peso  de  4  libras 1 

Cerdo,  peso      4  libras 2 

Cerdo,  Ídem     2  libras 1¿ 

Carnero,  pierna  6  espalda,  6  libras 1} 

Harnero,     id.     6    id.  4  libras 1 

Cochinillo  de  leche,  grande 2¿ 

Cochinillo  de  ídem,  pequeño 2 

Carnero,  un  cuarto  grande 1 

Carnero,  un    id.      pequeño 0\ 

Liebre  grande li 

Liebre  pequeña. Oj 

Conejo  grande Oi 

Conejo  pequeño 0] 

Guajolote  grande l\ 

Guajolote  mediano 1 

Guajolote  pequeño 

Pollo 

Ganso JL 

Pichón 0$ 


367 

1.253.  Modo  de  prqmrar  las  aoes  caseras  antes  deponerlas 
á  cocer  ó  asar. — Si  no  se  ha  tenido  la  precaución  de  matar- 
las algunas  horas  antes  de  ponerlas  al  fuego,  por  mas  esme- 
ro que  se  tenga,  jamás  se  conseguirá  presentarlas  tiernas  y 
jugosas,  ya  sean  asadas  6  cocidas.  La  que  ha  de  servir  para 
comer  debe  matarse  cuando  menos  la  víspera,  y  si  es  para 
cenar,  por  la  mañana  muy  temprano  si  no  se  hizo  la  noche 
anterior.  Si  acaso  fuere  un  convite  repontino  y  que  no  ha- 
ya habido  tiempo  para  dejarla  manir,  se  meterá  dentro  de 
agua  hirviendo  para  desplumarla,  mientras  puedan  sopor- 
tar las  manos  el  calor. 

Otro  medio  para  conseguir  que  las  aves  salgan  tiernas  es 
hacerlas  tragar  una  cucharada  de  vinagre  un  minuto  antes 
do  matarlas. 

Las  do  carne  negra,  como  gansos,  patos,  pichones',  etc, 
son  mucho  mas  tiernas  si  se  ahogan  que  degollándolas.  Si 
se  corta  la  cabeza  á  los  patos  no  deben  desplumarse  sino 
cuando  estén  frios. 

1.254.  Modo  para  hacer  tiernas  las  aves  de  corral  que  son 
viejas. — Pónganse  veinticuatro  horas  en  agua  fria,  en  laquo 
so  hayan  echado  algunos  puñados  de  ceniza;  pasado  este  tiem- 
po se  lavan,  despluman  y  destripan,  dejándolas  en  esta  dis- 
posición otras  veinticuatro  horas,  y  después  se  echan  en  la 
olla  para  que  hiervan  un  cuarto  de  hora.  Hecho  esto,  se 
mechan  y  ensartan  en  el  asador,  rodándolas  con  manteca 
muy  caliente  cuando  están  á  medio  cocer. 

1.255.  Pebre  ó  adobo  para  rociar  los  asados. — Se  pica  gor- 
dura de  puerco  mezclada  con  ajo  y  perejil,  se  le  añade  sal, 
pimienta,  una  cucharada  de  vinagre,  cuatro  de  aceite  y  se 
bate  todo  muy  bien. 


k  1  ,256.  Afedto  para  otte  /a  carne  sataa  tierna  y  blanda.  — An- 
te» de  poner  i  cocer  6  asar  toda  clase  de  carne  se  golpeará 
fuertemente  con  un  rodillo  de  madera»  cuando  menee  du- 
rante un  minuto. 

1,257.  Medio  para  preservar  pescado  de  la  corrupción. — 
Hágase  que  de  un  hervor  en  una  corta  cantidad  de  agua  y  sal, 
y  se  deja  dentro  dos  6  tres  días  sin  temor  de  que  se  corrom- 
pa, porque  se  precipita  al  fondo  y  queda  enteramente  cu* 
bierto  con  el  líquida  Si  fuese  necesario  conservarlo  mas 
de  tres  días,  se  vuelve  al  fuego,  añadiendo  otro  poco  de  sal 
y  una  hoja  de  laurel.  De  este  modo  puede  Aguantar  el  pes- 
cado tres  hervores.  Para  esta  operación  debe  usarse  vasija 
de  barro;  el  hierro  y  cobre  son  perjudiciales. 

1 .268.  Medio  para  conservar  las  huevos  frescos  durante  mu» 
cho  ti  nttpo. — A  medida  que  se  van  sacando  del  ponedor  de- 
ben untarse  con  aceite,  que  se  extiende  con  las  barbas  de 
una  pluma,  de  manera  que  están  bien  cubiertos  por  todas 
partes  y  en  seguida  se  colocan  sobre  una  mesa  para  que  se 
seque  el  aceite.  Conseguido  esto,  se  cubre  el  fondo  de  una 
vasija  que  cierre  bien  con  una  cama  de  ceniza  6  de  salvado 
y  encima  se  va  arreglando  otra  de  huevos,  continuando  asi 
hasta  que  está  llena.  Cuídese  mucho  de  tapar  axactamente 
la  vasija  siempre  que  se  abra,  porque  la  conservación  de 
los  huevos  preparados  de  este  modo  consiste  principalmen- 
te en  la  privación  del  aire  exterior.  No  se  sacarán  hasta  el 
momento  en  que  hayan  de  usarse,  y  si  se  quieren  hacer  pa- 
sados por  agua,  se  pondrán  dos  horas  antes  en  agua  fría. 

1.269.  Otro  modo  para  conservarlas  frescos  mucho  tiempo. — 
En  el  mismo  dia  que  los  pongan  las  gallinas  se  cuecen  co- 
mo si  fuera  para  comerlos  pasados  por  agua:  se  sacan  de 


369 

esta  y  se  anota  la  fecha  para  irlos  gastando  después  por  or- 
den de  su  antigüedad.  Hecho  esto  se  apiñan  en  un  sitio 
fresco  y  seco;  de  este  modo  se  conservan  muchos  meses  sin 
la  menor  alteración.  Cuando  se  hayan  de  emplear,  se  me- 
ten dentro  de  agua  caliente,  y  aun  es  preferible  echarlos  en 
fría,  se  pone  al  fuego  y  cuando  están  bien  calientes,  ya  los 
huevos  están  en  disposición  de  comerse. 

1,260.  Medio  para  talar  la  mantequilla. — Se  lava  muchas 
veces  para  que  suelte  la  leche  que  haya  podido  retener,  y 
se  toman  dos  libras  cada  vez,  las  que  se  extienden  sobre  la 
mesa  con  un  rodillo  como  la  masa,  dejándola  del  espesor  de 
un  dedo;  espárzase  por  encima  la  suficiente  cantidad  de  sal; 
pliegúese  en  tres  6  cuatro  dobleces  y  amásese  hasta  que  la 
Bal  se  haya  mezclado  perfectamente.  Repítase  la  misma  ma- 
niobra oon  otras  dos  libras  hasta  concluir  con  toda  la  man- 
toquilla,  la  que  se  va  poniendo  en  tarros  muy  limpios,  com- 
primiéndola mucho  para  que  no  quede  ningún  vacío. 

Cuando  están  llenos  los  tarros  se  disuelve  sal  en  un  poco 
de  agua,  se  echa  por  encima,  se  tapan  los  tarros  cuidadosa- 
mente y  se  ponen  en  un  lugar  frío. 

1 ,201.  Modo  para  conservar  fresca  la  mantequilla.  — En  un 
tarro  pequeño  se  echa  mantequila  hasta  que  le  falte  un  de- 
do para  que  este*  lleno;  se  vuelve  boca  abajo  colocándolo  so- 
bre un  plato  con  agua  hasta  la  altura  de  un  dedo,  y  se  re- 
novará asta  todos  los  dias.  Se  irá  gastando  esta  mantequi- 
lla oonforme  se  vaya  necesitando,  pero  siempre  con  las  mis- 
mas precauciones. 

1,262.  De  otro  modx — Mézclense  juntaB  y  perfectamente 
pulverizadas,  una  onza  de  azúcar,  una  de  nitro  y  dos  de  sal, 
amasándolos  después  con  cuatro  libras  de  mantequilla  muy 

LA  COCINERA  POBLANA. — TOM.  I. — 24. 


370 

lavad*  y  enjuta:  llénense  con  ella  lo*  tarro»  comprtmíé'iido- 
1a  con  fuerza  para  que  na  quede  hueco  alguno.  Se  tapan 
después  con  on  lienzo  en  dos  dobleces  y  untado  con  mante- 
quilla, rellenándose  conforme  se  vaya  aplomando  la  mante- 
quilla. Cúbranse  después  con  ana  lige/a  capa  de  mantequi- 
lla derretida  á  fuego  manso,  y  en  seguida  con  otra  muy  del* 
gada  de  las  sales  mencionadas,  tapándoles  lo  mejor  que,  sea 
posible.  Por  este  medio  se  conserva  la  mantequilla  mucho 
tiempo  siempre  fresca  y  con  un  sabor  muy  agradable.  Loe 
tarros  deben  ser  pequeños  á  fin  de  qoe  no  queden  medio 
vacíos  cuando  se  tiene  que  gastar.  En  este  caso  se  llena* 
rán  cuidadosamente  con  agua  saturada  con  sal. 

1.203.  Modo  de  derretir  la  mantequilla. — En  un  calde- 
ro muy  limpio  so  echan  tre:nta  libras  de  mantequilla,  cus- 
tro  clavos  de  especia,  dos  hojas  de  laurel  y  dos  cebollas,  y 
se  cuece  todo  á  fuego  muy  templado  durante  tres  horas,  sin 
quitar  la  espuma.  Cuando  está  enteramente  líquida,  se  apar- 
ta del  fuego  y  se  do  ja  en  reposo  una  hora:  se  espuma  y  vier- 
te después  por  decantación  en  vasija  de  barro.  Después 
de  llenas  se  ponen  en  un  lugar  fresco  cubriéndolas  con  un 
papel  de  estraza  y  un  ladrillo  encima. 

1.204.  De  otra  manera  en  baño-marte. — Se  echa  agua  en 
un  caldero,  y  cuando  está  hirviendo  se  mete  dentro  una  va- 
sija con  manteca  fresca,  dejando  que  cueza  á  fuego  manso 
hora  y  media  cuando  menos;  despúmese  despose  y  viértase 
por  decantación  en  botellas  de  barro,  que  deben  taparse 
bien. 

1,265.  Pan  rallado  para  rebotar  cottillat,  pié*  de  pnerco, 
efe. — Desmenúcece  con  la  mano  una  miga  de  pan  duro,  ex- 
tregándolo  después  entre  un  paño  de  cocina  z»aevo  para  que 


m 

quede  bien  deshecha.  Se  pasa  por  tamiz,  añadiendo  «al,  pi- 
mienta y  perejil  picado.  Derrítase  nn  poco  ríe  manteca  y 
empápense  en  ella  las  costilla»,  polvoreándola»  ron  pimienta 
y  tal,  pasándolas  y  repasándolas  en  todos  sentidos  por  enci- 
ma de  la  miga,  hasta  que  queden  bien  cubiertas.  En  segui- 
da se  ponen  á  asar  en  las  parrillas.  En  vez  de  manteca  pue- 
de usarse  aceite  frío. 

1.266.  De  otro  modo.~TS\  modo  mas  sencillo  de  obtener- 
las se  reduce  á  raspar  con  el  cuchillo  la  corteza  de  pan  muy 
recocido  6  rallado  en  un  rallo  de  hoja  de  lata. 

También  puede  prepararse  metiendo  dentro  del  homo  las 
cortezas  para  que  se  sequen  bien;  después  se  muele  y  pasa 
por  un  cedazo  muy  claro  para  separar  el  polvillo  y  luego  se 
pasan  por  otro  mas  tupido. 

1.267.  Mtxiode  conservar  las  carnes  frescas  en  tiempo  de 
calor. — Se  envuelve  cuidadosamente  con  un  lienzo  tupido 
la  carne  que  se  ha  de  conservar,  y  se  entierra  en  cisco  de 
carbón  en  un  paraje  que  mire  al  Norte. 

1.268.  Otro  modo. — Se  sumerge  la  carne  en  leche  cuaja- 
da; y  este  medio  es  tan  ventajoso  como  sencillo,  pues  la  le- 
che en  nada  altera  el  sabor  de  la  carne,  que  puede  conser- 
varse ocho  dias. 

1.269.  Modo  de  hacer  la  conserva  de  jitomates,  jqne  aconse- 
jamos adoptar,  pnes  es  tan  útil  como  ventajosa  para  atando 
escasean  los  jitomates. — Varios  son  los  modos  de  conservar 
este  fruto,  pero  el  mejor  de  todos  y  el  mas  sencillo  es  con- 
servarlos en  conserva;  e*sta  se  prepara  del  modo  siguiente: 
Se  escojen  los  jitomates,  se  cortan  á  pedazos  y  se  ponen  al 
fuego  en  un  cazo  que  esté*  bien  estañado;  cuando  están  bien 
deshechos  se  pasa  el  zumo  por  un  lienzo  claro,  se  vuelve  es- 


te  al  fuego  y  se  luce  cocer  hasta  que  te  vuelva  espeso  como 
£  punto  de  mermelada;  conforme  vaya  adelantándose  la  ope- 
ración se  procurará  que  sea  al  fuego  mas  suave  para  que  no 
se  requeme  la  conserva,  y  le  quede  buen  color.  Estando  á 
su  punto  se  guarda  en  botes  de  loza,  6  bien  puesta  en  plati- 
llos se  hace  secar  como  pasta  de  dulce,  y  así  se  guarda  en 
paraje  resguardado  de  la  humedad  en  los  mismos  platillos; 
antes  se  envuelve  en  papeles  untados,  con  aceite. 

1.270.  Preparación  de  la  maiUeca  sin  tal. — Se  dividen  en 
trocí  tos  pequeños  las  mantecas  del  serdo,  como  igualmente 
las  de  los  riñónos,  y  se  derriten  á  fuego  manso. en  vasija  de 
hierro  6  cobre,  meneándola  sin  cesar  hasta  que  se  haya  de- 
rretido alguna  parte,  añádase,  si  se  quiere,  tomillo,  laurel  y 
pimienta  en  rama,  pero  no  sal,  porque  impediría  la  mezcla. 
Actívese  el  fuego  y  cuando  la  grasa  no  despide  humo  es  se- 
ñal de  que  está  cocida:  entonces  se  cuela  por  tamiz  bien  tu* 
pido,  llenando  loe  tarros,  que  deben  ser  de  barro,  hasta  el 
borde.  Se  tapan  con  dos  ó  tres  hojas  de  papel  grueso  en 
lugar  fresco. 

1.271.  Derretido  y  purificación  de  loe  manteca*. — Se  divi- 
den en  trocitos,  separando  las  membranas  y  filamentos,  se 
echan  en  agua  hirviendo,  en  donde  permanecerán  cociendo 
un  cuarto  de  hora,  esparciéndolos  bien.  Saqúense  después 
para  despachurrarlos  en  un  plato  con  un  tenedor.  Esta  es- 
pecie de  picadillo  se  vuelve  á  echar  después  en  agua  hirvien- 
do para  que  cueza  mansamente  por  espacio  de  una  hora. 
Cuélese  después  por  una  servilleta  en  una  vasija,  dejando 
que  se  fije  ó  congele  la  grasa  sobre  la  superficie  del  agua. 
Se  levanta  oon  cuidado  y  se  limpia  por  debajo  volviéndolo 
á  derretir  de  nuevo  en  baño  de  María,  á  fin  de  que  suelte 


373 

el  agua  que  haya  podido  retener.  Hecho  esto  se  vacía  en 
tarros.  Todas  las  grasas,  tanto  creídas  como  cocidas,  pue- 
den clariBcarse  por  esto  método  y  ser  útil  para  toda  clase 
de  guisos,  y  aun  para  cosas  de  pastelería,  con  tal  de  que  su 
calidad  primitiva  sea  buena. 


Urbanidad  en  la   Mesa, 


Al  dar  en  este  '«Tratado  de  Cocina,»  algunas  reglas  gene- 
rales acerca  de  la  conducta  que  debe  observar  el  hombre  en 
la  mesa,  ya  como  convidado,  ya  como  dueño  de  casa,  ni 
por  un  momento  deben  creer  nuestros  lectores  que  nos  he- 
mos propuesto  ensenarles  lo  que  de  antemano  suponemos 
que  han  aprendido.  Mas  como  es  de  creer  que  en  su  gene- 
ralidad son  padres  6  madres  de  familia,  que  tienen  hijos  á 
quienes  educar,  para  que  tengan  escritas  las  leyes  de  buena 
aducacion,  que  sin  duda  se  proponen  inculcarles,  les  dedi- 
camos las  que  siguen  á  continuación,  persuadidos  desque, 
no  solo  serán  bien  recibidas  por  los  numerosos  soscritores 
de  La  Cocinera  Poblana,  sino  que  las  recibirán  como  un 
sincero  deseo  que  tenemos  de  contribuir  á  la  buena  educa- 
ción de  sus  hijos. 


«74 

L  Nunca  deba  uno  presentase  en  una  ose*  á  la  hora  de 
almorzar  6  de  comer,  á  menoe  de  un  convite  f oí  mal. 

2.  Jamás  debe  llevaras  consigo  un  perro  á  una  casa,  sea 
que  se  vaya  á  ella  para  comer  ó  para  hacer  una  visita. 

3.  Tampoco  se  debe  llevar  á  los  niños  á  comer  á  ningu- 
na casa,  á  menos  <jue  no  tengan  mas  de  ocho  años  y  que  en 
este  caso,  hayan  sido  convidados  expresamente. 

4.  Los  hombres  deben  llegar  á  la  hora  precisa  que  se 
ha  indicado  en  el  convite,  y  no  mas  tarde;  pero  si  se  quiere, 
se  puede  ir  ocho  ó  diez  minutos  antea 

6.  Solamente  los  grandes  señores  y  loa  mal  educados  se 
hacen  esperar. 

6.  Una  señora  que  se  hace  esperar  mas  de  un  cuarto  de 
hora,  es  una  mujer  que  quiere  llamar  la  atención,  pero  que 
se  engaña  torpemente,  porque,  si  antes  de  entrar,  pudiese 
escuchar  a  la  puerta,  quedaría  mas  que  convencida  de  ello. 

7.  Cuando  se  anuncia  que  la  comida  está  servida,  no 
debe  uno  precipitarse  hacia  al  comedor. 

8.  Debe  ofrecerse  el  brazo  izquierdo  i  una  señora  y  con- 
ducirla al  comedor. 

9.  Al  conducirla,  el  hombre  pasa  antes  que  ella  sin  de- 
jar su  brazo.  En  cualquiera  otra  circunstancia  pasar  antes 
que  una  señora  es  una  grosería. 

10.  Los  superiores  deben  pasar  primero,  y,  en  general, 
todas  las  personas  que,  en  la  sociedad,  ocupan  un  rango 
mas  elevado  que  el  nuestro. 

11.  £1  dueño  de  la  casa  entra  generalmente  el  último  y 
la  dueña  primero. 

12.  ¡Si  alguno  se  retira  de  la  puerta  cediendo  el  paso, 
uno  debe  detenerse  y  hacer  lo  mismo  con  ¿1;  mas  si  insiste, 


$75 

pásese  y  «alúdese.    Todas  estas  ceremonias  de  la  puerta  son 
monadas  muy  ridiculas. 

13.  Antes  de  acercarse  á  la  mesa,  debe  uno  esperar  que 
se  le  haya  designado  su  lugar,  á  menos  de  que  los  nombres 
no  se  encuentren  sobre  las  servilletas. 

14.  JNadie  debe  sentarse  hasta  que  el  dueño  de  la  casa 
dtf  la  señal  sentándose  el  mismo. 

16.  En  todo  caso,  espérese  á  que  las  señoras  se  hayan 
colocado  antes. 

16.  No  debe  uno  sentarse  ni  muy  cerca  ni  muy  lejos  de 
la  mesa. 

17.  Así  como  no  debe  uno  sentarse  el  primero,  tampoco 
debe  desdoblar  la  servilleta  antes  que  el  dueño  de  la  casa. 

18.  La  servilleta  no  debe  desdoblarse  enteramente,  sino 
extenderla  sobre  las  rodillas. 

19.  A  las  señoras  les  es  permitido  prenderse  -la  serville- 
ta del  modo  que  gusten. 

20.  No  hay  que  doblar  las  mangas  del  frac,  como  si  fue- 
se uno  á  lavarse  las  manos. 

21.  La  actitud  debe  ser  natural,  pero  decente;  nada  de 
movimientos  marcados,  balanceo,  etc. ,  etcl 

22.  Cuidado  de  no  incomodar  á  los  vecinos  con  los  co- 
dos en  la  vivacidad  de  los  movimientos. 

23.  Toda  gesticulación  irregular  es  incómoda  é  inconve- 
niente. 

24.  No  se  deben  mover  los  pies  á  derecha  e*  izquierda 
debajo  de  la  mesa. 

25.  Los  codos  no  deben  ponerse  sobre  la  mesa. 

26.  No  debe  subirse  la  voz  como  si  se  hablase  á  los 
tordos. 


376 

27.  Si  la  conversación  es  general,  háblese  bastante  alto 
para  ser  oído  de  todos;  y  si  hay  Tanas  conversaciones  par- 
ticulares, háblese  bajo  para  no  molestar  á  los  vecinos  en  su 
conversación. 

28.  Cuando  se  pida  algo  al  criado  que  sirve,  no  se  le  lla- 
me muchacho,  como  se  dice  en  un  calé,  sino  por  su  nombre, 
y  si  no  se  sabe,  hágasele  una  seña  sin  nombrarle. 

29.  "No  se  diga  ni  se  haga  nada  que  pueda  traer  una  dis- 
cusión política  ó  religiosa. 

30.  Guando  los  dueños  de  la  casa  sirven  ellos  mismos, 
la  persona  á  la  que  le  destinan  un  plato  no  debe  pasarlo  á 
otra;  esto  sería  una  grosería. 

31.  En  una  comida,  aunque  fuese  en  una  mesa  redonda, 
no  debe  pedirse  ni  indicarse  el  pedazo  que  se  prefiera. 

32.  Nunca  debe  uno  presentar  su  plato  para  ser  servido 
el  primero. 

33.  No  se  debe  soplar  la  sopa  cuando  está  caliente;  sino 
esperar  á  que  se  enfrie. . 

34.  El  caldo  debe  tomarse  con  la  cuchara,  y  no  llevar 
la  tasa  á  la  boca. 

36.  Para  tomar  la  sopa  no  se  debe  tomar  el  tenedor  al 
mismo  tiempo  que  la  cuchara. 

36.  Solamente  los  carreteros  echan  vino  en  el  caldo. 

37.  En  muchas  casas  de  tono  no  se  cambian  los  cubier- 
tos hasta  que  se  sirven  los  postres.  En  ese  caso,  debe  te- 
nerse cuidado  de  quitarse  el  tenedor  y  el  cuchillo  antes  de 
que  cambien  el  plato:  la  cuchara  solamente  se  deja  en  el  pla- 
to de  la  sopa. 

38.  El  pan  no  se  debe  morder  ni  cortarlo  en  pedazos  an- 


S77 

ticipadamente;  conforme  Be  come  se  rompe  en  pedacitos  con 
los  dedos. 

39.  Las  rebanadas  de  pan  con  manteca  no  se  toman  ni 
se  sirven  sino  con  el  té. 

40.  •  La  carne  se  corta  en  pedacitos  á  medida  que  se  toma. 

41.  No  debe  comerse  con  avidez  y  llenarse  la  boca. 

42.  Solamente  la  gente  mal  educada  toma  sal  con  los 
dedos. 

43.  Tampoco  debe  limpiarse  el  plato  de  la  salsa  que  ha- 
ya quedado  en  el  con  la  miga  de  pan,  para  comerla  en  se- 
guida. 

44.  No  debe  olfatearse  el  plato  que  se  nos  acaba  de  ser- 
vir. 

45.  Los  huesos  deben  colocarse  al  borde  del  plato. 

46.  £1  que  se  ponga  á  roer  un  hueso  parecerá  un  animal. 

47.  Eí  que  encuentre  alguna  cosa  sucia  debe  dar  su  pla- 
to á  un  criado,  sin  decirlo  á  ninguno  de  los  convidados,  á 
menos  que  no  sea  un  alfiler  ú  otra  cosa  peligrosa,  en  cuyo 
caso  debe  advertirse  para  que  lo  sepa  el  cocinero. 

48.  El  cuchillo  no  debe  tomarse  sino  para  servirse  de  él. 

49.  Téngase  cuidado  de  no  volcar  el  salero;  de.no  poner 
en  cruz  el  cuchillo  con  el  tenedor,  de  no  poner  el  cuchillo 
con  el  filo  hacia  arriba,  etc,;  porque  puede  haber  entre  los 
convidados  algunos  supersticiosos  que  se  espanten  de  ello; 
es  preciso  respetar  á  las  personas  aun  en  sus  mas  ridiculas 
debilidades. 

60.  No  debe  criticarse  los  manjares  que  se  sirven,  ni  ha- 
cer comparación  de  un  manjar  con  otro  semejante,  por  me- 
jor que  se  haya  comido  en  otra  parte. 

51.     Si  se  sirve  algún  pescado  ú  otra  cosa  ya  muy  pasada 


878 

no  se  coma  de  ella,  pero  no  se  diga  nunca  que  te  encuentra 
mala. 

52.  No  ie  debe  hablar  con  xa  boca  llena,  porque  es  fá- 
cil salpicar. 

53.  Debe  comerse  con  una  limpien  extrema  y  no  hacer 
ruido  con  los  labios  ni  con  las  quijadas. 

54.  Los  dedos  se  limpian  en  la  servilleta  y  no  en  el 
mantel. 

55.  Cuando  se  come  un  huevo  pasado  por  agua,  se  rom- 
pe la  cascara  sobre  un  plato  con  un  cuchillo. 

56.  Cuando  se  presenta  un  plato  para  que  uno  se  sirva 
de  el ,  no  debe  llenarse  el  propio  como  hacen  los  albaftiles9 
sino  servirse  con  discreción;  pues  siempre  hay  tiempo  de 
volver  á  tomar. 

57.  Nunca  debe  uno  servirse  con  su  propio  tenedor,  si- 
no con  el  que  está  en  el  plato:  aquel  se  debe  tener  con  la 
mano  izquierda  para  no  verse  en  la  necesidad  de  cambiar  á 
cada  instante  el  cnchillo  y  el  tenedor  de  una  mano  á  la  otra: 
el  cuchillo  se  tiene  con  la  mano  derecha. 

58.  No  se  depe  limpiar  el  vaso  con  la  servilleta  antea  de 
beber,  porque  es  una  acusación  tácita  de  poca  limpieza  que 
se  hace  contra  la  casa. 

59.  Procúrese  no  dejar  ni  agua  ni  vino  en  los  vasos  an- 
tes de  levantarse  de  la  mesa. 

60.  El  tomar  el  vaso  de  un  vecino  6  vecina  para  que  le 
sirvan  de  beber  es  propio  de  gente  ordinaria. 

•61.  Pene  cnidamp  de  que  la»  señoras  que  tiene  uno  á 
su  Indi»  se.in  bien  servida»,  y,  ni  puede  uno  adivinar,  pre- 
vénganse aun  sus  mas  pequeños  deseos. 


379 

62.  No  se  pida  Champaña  6  Bni-deot,  sino  vino  de  Cham* 
peña  6  vino  de  Burdeos. 

6&  En  los  postres,  no  ee  debe  guardar  en  los  bolsillos 
frotas,  bizcochos,  etc. 

64.  La  fruta  no  se  corta  con  un  cuchillo  grande,  sino 
con  el  que  se  presenta  con  este  objeto. 

65.  La  pera  se  corta  longitudinalmente  en  cuatro  partes 
que  se  mondan  á  medida  que  se  toman. 

66.  A  una  señora  no  se  le  ofrece  la  mitad  de  una  fruta 
que  se  tiene  en  el  plato.  Esta  familiaridad  no  se  permite 
mas  que  á  una  señora  de  cierta  edad,  sobre  todo  si  se  diri- 
je  á  un  caballero. 

67.  Mas  si  la  fruta  no  es  bastante  para  todos,  se  ofrece 
á  una  señora  el  pedazo  mas  grande  con  el  cuchillo. 

68.  No  debe  comerse  muy  de  prisa  para  no  darla  á  los 
demás,  ni  muy  espacio  para  no  hacerse  esperar. 

69.  Al  estornudar,  cufdese  de  no  salpicar  á  los  rocinos. 

70.  El  pañuelo  debe  guardarse  inmediatamente  en  el 
bolsillo,  después  de  haberse  sonado. 

71.  Nada  es  mas  innoble  que  beber  con  los  labios  llenos 
de  grasa. 

72.  Será  una  falta  grande  el  olfatear  y  beber  el  riño  po- 
co á  poco,  como  si  se  gustase. 

73.  El  hombre  que  se  permita  beber  en  el  mismo  Taso 
de  una  señora,  bajo  el  tonto  pretexto  de  adivinar  lo  que 
ella  piensa,  es  un  hombre  mal  educado. 

74.  Seria  indecoroso  beber  á  la  salud  de  alguien,  antes 
que  el  dueño  de  la  ca**,  á  menos  que  no  se  beba  á  la  ailud 
de  ente. 

75.  Si  alguno  bebe  á  nuestra  salud,  correspóudaje,  t>ao 


980 

nada  de  arengas  porque  eso  inoumoda  la  digestión  de  los 
celosos  y  de  los  envidiosos. 

78.  Solamente  las  personas  mal  educadas  rompen  su  Ta- 
so, después  de  un  brindis,  para  aumentar  el  entusiasmo:  al- 
go tiene  eso  de  la  oomida  de  cuartei 

77.  Cuando  alguno  bebe  á  la  salud  del  dueño  de  la  casa, 
se  debe  beber  todo  el  vino  que  contenga  el  vaso,  pues  uno 
es  libre  de  no  hacerse  servir  sino  poco. 

78.  Como  el  vino  de  Champaña  causa  alguna  animación, 
un  momento  de  alegría  es  permitido  en  los  postres,  con  tal 
que  no  sea  estrepitosa  ni 'gesticulante. 

79.  Evítese,  sobre  todo,  esa  risa  prolongada,  sin  causa 
aparente,  si  no  se  quiere  pasar  por  tonto  y  algunas  veces 
por  malcriado. 

80.  Solamente  los  que  no  tienen  educación,  tiran  boli- 
tas de  pan  á  los  convidado*. 

&L  La  grosería  on  las  maneras  y  en  las  costumbres  des- 
cubre siempre  la*grosería  de  la  inteligencia  y  del  corazón. 

82.  Cuando  uno  se  aperciba  de  haber  tomado  bastante, 
jno  se  debe  beber  mas,  por  mas  instancias  que  se  hagan,  por- 
que se  podría  obrar  y  hablar  como  un  ¿brío,  y  la  embria- 
gues es  el  mas  crapuloso  de  todos  los  vicios. 

83.  No  es  necesario  devolver  el  vaso  hacia  abajo  para 
indicar  que  no  se  quiere  beber  mas:  basta  rehusarlo  confir- 


84.  No  se  debe  hablar  al  oído  ni  en  vos  baja,  6  con  un 
aire  misterioso,  porque  las  personas  susceptibles  podrían 
creer  que  se  habla  de  ellas. 

86.  Cuando  se  hable  de  alguna  persona,  nómbresela, 
pero  no  se  la  apunte  con  el  dedo. 


881 

86.  Si  el  cafó  está,  caliente,  espérese  á  que  se  enfríe,  pe- 
ro no  se  vacíe  en  el  platillo  por  ningún  motivo. 

87.  Guando  se  presenta  el  agua  tibia  para  enjuagarse  la 
boca  y  lavarse  los  dedos,  obsérvese  el  mayor  aseo  posible. 

88.  Ninguno  debe  levantarse  de  la  mesa  antes  que  el 
dueño  6  dueña  de  la  casa  hayan  dado  la  señal,  levantándo- 
se ellos  mismos. 

89.  Al  levantarse,  déjese  la  servilleta  sobre  la  mesa  sin 
doblarla,  y  no  sobre  el  respaldo  de  la  silla. 

90.  %  Ofrézcase  el  brazo  á  una  señora  para  conducirla  al 
salón,  y  no  se  deje  ver  ninguna  preferencia  en  la  elección* 

91.  Seria  una  falta  de  educación  retirarse  apenas  levan- 
tados de  la  mesa.  La  urbanidad  exige  quedarse  al  menos 
una  hora  en  el  salón. 


Servicio  de  la  Mesa 


REGLAS  PARA  TRINCHAR  DEBIDAMENTE. 


Suprimimos  aquí  el  érden  y  colocación  de  los  platos,  pla- 
tones y  demás  accesorios  de  mesa  que  acompañan  general- 
mente los  libros  de  cocina,  porque  esas  reglas  de  estampilla 
nos  parecen  inútiles  para  el  público  en  general,  y  solo  las 
creemos  de  provecho  para  los  fondistas. 


Supslher  que  la  persona*  que  convida  1  otra,*  está  obligada 
á  presen Ur  docenas  de  plato*;  platones,  onhiertns,  vasos  y 
botellas,  es  admitir  que  comemos  mas  con  los  ojos  que  con 
la  boca,  y  que  estamos  obligados  á  la  ostentación.  Por  lo 
mismo,  considerando  que  cada  cual  debe  obrar  en  la  órbita 
de  sus  medios  de  fortuna,  solo  daremos  reglas  generales  7 
cada  cual  las  aplicará  según  pueda  7  nasca  de  los  deseos  que 
de  obsequiar  á  sus  amigos  tenga  el  que  los  reúna  en  tu 
mesa. 

Esta  debe  servirse  de  los  manjares  mas  delicados  que  per- 
mitan las  facultades  propias,  sin  fijarse  en  la  posición  de 
los  convidados:  debe  haber  abundancia  sin  profusión. 

SI  que  convida***  comer  á  su  casa  á  alguno,  aunque  sea 
un  artesano,  le  dede  los  mismos  miramientos  que  á  los  de- 
más convidados,  excepto  los  asientos  principales. 

Al  lado  de  cada  oonvidado  deben  ponerse,  si  es  posible, 
tres  6  cuatro  vasos;  una  oopa  grande  para  el  vino  ordinario, 
una  chica  para  el  vino  seco  7  otra  para  el  Champaña. 

No  debe  servirse  cocido  en  un  convite;  es  mejor  servir 
dos  clases  de  sopas. 

La  dueña  de  la  casa  debe  cuidar  de  que  al  cambiarse  los 
platas  se  observe  la  major  simetría  posible. 

Una  buena  comida  puede  componerse  de  una  sopa,  cu- 
briendo dus  veces  la  mesa,  7  los  postres.  Estos  deben  pre- 
sentarse á  los  convidados  para  que  cada  cual  se  sirva  con  la 
cuchara,  7  no  dejarlos  en  la  mesa  para  que  se  sirvan. 

En  las  comidas  de  etiqueta  solo  sirven  hombres;  en  las 
^e  confianza  pueden  servir  las  criadas. 

L.-a  }  «escaries  se  s¡!  -venadee)  ues  de  los  demás  guisados. 

Va  no  es  costumbre  trinchar  en  la  mesa,  sino  que  las 


383 

viandas  se  colocan  trinchadas  en  un  aparador  y  al  ama  de 
cala  corresponde  poner  los  platos  ó  hacer  que  se  pase  el  pla- 
on  al  derredor  de  la  mesa  para  que  se  sirva  cada  cual  lo 
que  le  acomode.  Damos  sin  embargo,  á  continuación  las  re* 
glas  que  se  observan  para  el  buen  servicio  de  la  mesa,  y  pa- 
ra trinchar  con~desembarazo  y  acierto. 

El  orden  de  servir  los  platos  y  bebidas  debe  ser  primera* 
mente  á  las  señoras;  principiando  por  la  de  la  casa,  luego  á 
los  caballeros,  según  su  gerarquiaó*  dignidad,  y  en  Igualdad' 
de  circunstancias,  á  loe  mayores  en  edad. 

Si  hubiere  dos  6  tres  clases  de  sopa,  se  advertirá  para  que 
pida  cada  uno  de  la  que  guste;  sirviéndola  con  el  cucharon: 
lo  mismo  se  hará  con  las  verduras  y  carnes,  aproximando  la 
salsera  para  que  cada  uno  tome  lo  que  guste.  Cuando  algu- 
no de  los  convidados  haya  concluido  de  comer  una  sopa,  po- 
drá invitarle  á  que  tome  mas  de  la  misma  6  coma  de  otra. 
Esta  invitación  deberá  hacerla  en  todos  los  demás  platos, 
sin  insistir  muchas  veces  á  que  lo  verifique,  y  con  mayor  ra- 
zón debe  evitarlo  en  toda  clase  de  bebidas. 

Procurará  hacer  la  repetición  de  los  manjares  de  modo 
que  nunca  falte  y  siempre  so  Ve,  y  si  la  comida  no  fuese  por 
demás  abundante,  deberá  hacer  un  cálculo  prudente  de  lo 
que  pueda  poner  á  cada  convidarlo,  sin  que  por  esto  en- 
tienda en  el  caso  contrarío  qun  debe  hacer  platos  como  si 
sirviese  á  personas  hambrientas. 

El  cucharon,  cuchillo  6  trinchante,  lo  dejará  descansar 
en  el  plato  común  tan  pronto  como  acabe  de  servir,  y  nun- 
ca sobre  los  manteles,  ni  monos  tenerlo  en  la  mnno. 

Pobo  procurar  también  no  servir  plato  con  cuchara,  te- 


384 

nedor  6  cuchillo  que  haya  tocado  á  otro  guiso,  dando  cada 
▼es  platos  limpios  siempre  que  haya  de  servir. 

£1  cocido  debe  servirse  en  tres  platos:  uno  con  la  verdu- 
ra, otro  con  los  embuchados  y  carne  de  cerdo  ya  partida  en 
pequeños  trozos,  y  otro  con  la  carne  de  otra  clase;  esta  es 
preciso  siempre  cortarla  al  través  en  pedazos  proporciona* 
dos,  cuidando  de  despojarla  antes  de  los  huesos,  y  procu- 
rando que  si  tiene  algo  de  gordo,  vaya  bien  repartido  en 
todos  los  trozos;  se  pone  un  tenedor  en  cada  plato  y  sé  ha* 
ce  circular  para  que  cada  uno  se  ponga  lo  que  guste. 

Pierna  de  carnero. — Se  principia  por  sujetarla  con  el  trin- 
chante, se  hace  con  el  cuchillo  una  incisión  profunda  hasta 
el  hueso  un  poco  al  través  y  por  la  parte  mas  delgada,  des- 
pués se  van  partiendo  trozos  y  cuando  estén  los  que  se  de- 
seen se  tira  otro  corte  horizontal  por  debajo;  vuelta  del  otro 
lado  se  hace  la  misma  operación,  cuidando  de  rociarla  de 
salsa  con  una  cuchara  antes  de  servirla. 

Espalda  de  carnero.  — La  manera  de  dividir  este  trozo  es 
casi  siempre  sacando  costillas;  sin  embargo,  en  las  mesas  de 
mas  cumplimiento  se  saca  el  filete  grueso  que  está  en  la  par- 
te exterior  de  las  costillas,  y  se  corta  al  través  en  trozos: 
debe  tenerse  presente  que  las  \a jadas  mas  delicadas  son  las 
que  mas  adheridas  están  á  los  huesos  y  con  ellas  se  deben 
hacer  los  presentes  á  las  señoras. 

Cordero. — Se  trincha  lo  mismo  que  el  carnero,  cuidando 
de  no  quitarle  su  pellejo  tostado,  que  es  sumamente  gusto- 
so y  muy  apetecido  de  los  gastrónomos. 

Cerdo  y  jabalí.  —La  cabeza  del  lechon  debe  cortarse  lo 
mas  pronto  posible;  á  su  disección  debe  acompañar  siempre 
el  tenedor  con  el  cuohillo.  Se  principia  partiendo  los  peda- 


385 

ios  de  pellejo,  cuidando  de  que  ellos  tengan  alguna  carne 
adherida,  aunque  no  mucha,  pues  es  carne  insípida  y  poco 
agradable. 

£1  lechon  al  fin  del  estío,  ofrece  un  plato  recomendable; 
pero  apenas  llega  á  la  mesa,  es  preciso  proceder  á  su  disec- 
ción, porque  de  enfriarse  pierde  su  mérito. 

Juman, — Esta  parte  del  cerdo  ofrece  uno  de  los  platos 
mas  distinguidos;  generalmente  se  sirve  fría  Se  corta  per- 
pendicularmente  en  lonjas  delgadas,  sujetándolo  con  el 
trinchante,  y  después  se  da  otro  corte  horizontal  por  abajo 
para  separarlas. 

Conejo  y  liebre. — Se  presentan  enteros,  clavado  el  trin- 
chante en  uno  de  sus  cuartos  delanteros.  Se  hacen  dos  in- 
cisiones á  lo  largo  del  lomo,  se  levanta  é*ste,  se  despega  de 
los  huesos  del  espinazo  y  se  corta  en  tajadas  pequeñas;  des- 
pués se  despegan  los  magros  de  la  pierna,  y  desprendida  la 
cola  y  su  circunferencia,  sirve  como  plato  de  atención. 

Guajolote,  pollas  y  capone*. — Se  empieza  cortando  el  ala 
derecha  y  sucesivamente  los  cuatro  miembros,  sujetando 
bien  con  el  trinchante,  é  introduciendo  el  cuchillo  nasta 
partir  las  coyunturas;  de  este  modo  queda  el  lomo,  con  po- 
co que  se  profundice,  casi  vuelto,  y  entonces  es  fácil  el  di- 
vidirlo pasando  el  cuchillo  horízontalmente. 

La  pechuga  se  divide  tirando  un  corte  por  el  medio,  y 
desprendiéndola  de  los  huesos,  se  corta  en  pequeños  trozos, 
teniendo  cuidado,  al  servirla,  de  que  estos  vayan  bien  des- 
prendidos, y  se  hace  circular;  debe  cortarse  pronto  para  que 
conserve  su  calor. 

Pato  y  ganso. — En  las  mesas  de  convite  no  debe  cortarse 
la  carne  de  sus  piernas,  ni  menos  la  de  los  alones;  deben  ha- 

la  cocnmu  toblaka. — toic  l — 25. 


986 

cene  dos  incisiones  i  lo  largo  de  la  pechuga,  y  de  ésta  tacar 
loa  trozos,  procurando  salgan  delgados,  porque  de  este  mo- 
do tiene  mas  gusto. 

Pichones  y  perdices. — Los  dos  platos  mas  distinguidos  de 
volatería.  Se  dividen  en  cuatro  partes  iguales,  y  por  consi- 
guiente á  cada  una  va  adherida  un  alón  6  pierna;  los  trozos 
que  llevan  ésta  son  los  primeros  que  deben  servirse  á  las 
personas  que  se  quiera  obsequiar;  la  perdiz  no  guarda  e*ta 
regla,  y  es  preferible  sienpre,  como  trozo  mas  distinguido, 
la  parte  que  lleva  alón. 

Pescado  de  mar  y  de  agua  dulce, — En  la  mayor  parte  de 
los  pescados  que  se  sirven  en  las  mesas  debe  emplearse  pa- 
ra su  división  la  llana  de  plata,  especie  de  cuchillo  ancho  y 
delgado  sin  corte,  que  tiene  en  la  superficie  algunos  calado 
para  escurrir  las  salsas;  los  cuchillos  de  acero  son  perjudi- 
ciales y  al  mismo  tiempo  destrozan  los  mejores  trozos  si  es 
tá  algo  tierno  6  es  delicado. 

Pastas. — Las  tortas,  timbales,  empanadas  y  otras  pastas 
grandes  rellenas  se  sacan  á  la  mesa  con  la  tapa  sobrepuesta; 
si  estuviese  pegada  se  la  da  un  corte  al  rededor  y  se  levanta, 
poniéndola  en  otro  plato;  se  sirve  del  relleno,  añadiendo  un 
pedazo  de  pasta;  si  el  relleno  fuese  de  piezas  enteras,  como 
codornices,  pajaritos,  etc. ,  se  trinchan  en  un  plato  y  se  sir- 
ven del  modo  dicho.  Siendo  pastas  menudas,  se  sirven  sin 
partir;  si  son  medianas,  en  pedazos  chioos  á  lo  largo  y  ancho, 
6  desde  el  medio  á  la  circunferencia,  como  los  hojaldres. 

Frutas. — Los  melones  se  cortan  eti  rebanadas  á  lo  largo; 
las  sandías  se  dividen  por  la  mitad  al  través  y  se  hacen  rajas. 
Las  manzanas,  peras,  naranjas  y  duraznos  se  cojen  oon  pun- 
zones dispuestos  al  efecto  6  oon  un  cuchillo  limpio,  y  se  mon- 


387 

dan  de  alto  á  bajo;  se  parten  en  pedazos  y  se  sirven  con  el 
cuchillo. 


Luego  que  se  hayan  cepillado  los  bordes  de  la  mesa,  sir- 
ven los  criados  los  platos  de  los  postres  con  un  cubierto,  pe- 
ro sin  ponerlo  en  cruz. 

Se  empiesa  por  el  queso,  que  el  dueño  de  la  casa  divide 
en  pedazos  antes  de  hacerlo  servir. 

En  seguida  se  sirven  las  frutas  que  la  dueña  de  la  casa  es- 
coge y  hace  pasar  á  cada  uno  en  un  plato.  Cuando  se  sirven 
así,  seria  una  grosería  bien  grande  pasar  A  un  vecino,  y  aun 
á  una  señora,  el  plato  que  la  dueíia  de  la  casa  nos  envía  ex- 
presamente. 

Los  dulces  se  sirven  después  de  la  fruta,  y  antes  de  las 
frutas  y  bizcochos  helados  que  suelen  servirse;  en  seguida 
los  dulces  secos.  Después  de  esto  se  pasa  al  salón  á  tomar 
el  café. 


FIN  DEL  TOMO  PRIMERO, 


ÍNDICE. 

/ — 

FÁGg. 

Primera  advertencia 5 

Segunda  advertencia 6 

Principales  términos  de  cocina 7 

Abarbetar.     .             7 

Aderezar 7 

Aperdigar. 7 

Bañar. 7 

BaftoMaria 7 

Calar. 7 

Deshuesar 7 

Empanar 7 

Enlardar 8 

Escabechar 8 

Escaldar 8 

Exprimir 8 

Estofar 8 

Lardear 8 

Macerar 8 

Majar 8 

Manga. 8 

Mechar. 8 


390 

PAOS. 

Preparar 8 

Ramito 9 

Roborar 0 

Rehogar 9 

Bailar 9 

Sazonar 9 

Soasar 9 

Soflamar 9 

Tamiz. 9 

PARTE  PRIMERA. 

COCINA  DOMÉSTICA. 

SOPAS,  CALDOS  Y  JUGOS. 


Sopa  de  pan 11 

ti    á  la  juliana  .........  11 

Otra  juliana 11 

Sopa  juliana  bearneaa» 12 

ii     de  primavera      ........  12 

ii     de  yerbea 12 

ii    á  la  jardinera 13 

ti    de  ajo    ..........  13 

m     de  arroz. 13 

n    de  otro  modo Vi 

Otro  modo 13 

Sopa  de  arroz  con  leche     .......  14 

o    de  pasta,  fécula,  sémola  y  aahagú  á  la  española.  14 

n    de  macarrones     . 14' 


361 

Sopa  de  macarrones  á  la  italiana 15 

ti    de  fideos. 16 

i»    de  fideos  con  leche 15 

i»    de  fideos  y  pan 15 

M    de  macarrones  con  queso  .......  16 

ti    de  rabióles 1C 

ti    inglesa  de  rabióles 17 

tt    de  rabióles •    .  17 

n    de  harina  de  papa. 18 

ti    de  harina 18 

it    á  la  francesa. 18 

Otra  sopa  francesa. 18 

Sopa  de  acederas 19 

ti    flaca, 19 

ft     de  chícharos 19 

Otra 20 

Sopa  de  col 20 

it    de  frijoles 20 

tt    de  lentejas 21 

ii    de  capirotada 21 

ti    sencilla  con  huevos 21 

it    de  pan  con  pescado    .......  21 

ti    de  papas. 21 

Gran  sopa  de  pan  aderezada 22 

Sopa  de  carne 22 

tt    de  la  reina 23 

ti    de  tortuga 24 

u    imitación  de  la  de  tortuga 24 

tt    de  tortilla 25 

Otra 25 


392 

ríos. 

O*» 25 

Sopa  de  calaba»  en  leche 26 

ti    de  samóla 26 

ii    de  zanahorias  nuevas. 26 

h    de  albondiguillas 26 

it    de  albóndigas 27 

ii    de  pan  con  ostiones 27 

it    de  ostiones 27 

Otra  sopa  de  ostiones 28 

Sopa  de  cebolla 28 

»i    de  puerros 28 

ii    de  aves  caseras 28 

n    tostada 29 

ii    á  la  Monaco 29 

ii    de  almendra 29 

ii    á  la  habanera 29 

ii    de  arroz  ajiaco  cubana. 30 

ii    de  tallarín  en  estofado 30 

Migas  (sopa  seca)  .      ........  30 

Qaspacho  (sopa  fría) 31 

Caldo. 31 

de  sustancias 31 

hecho  en  una  hora            31 

de  pollo  para  enfermos 32 

de  ternera  para  enfermos. 32 

de  gallina 32 

Panatela  6  sustancias  de  pan 32 

Jugo  de  aves  y  caza 32 

» 32 

Extracto  de  buey  para  los  enfermos      ....  33 


PAOS 

Consumado  á  Muría   Luisa 33 

Caldo 34 

Caldillo 3* 

Caldo  de  aves 34 

Otro 34 

PUBES. 

Puré  de  chícharos,  lentejas,  frijol  blanco,  habas  etc.  35 

m    do  chícharos  verdes 35 

it    de  chícharos  secos 36 

it    de  raíces 3G 

it    de  zanahorias 36 

it    á  la  conde 36 

»t    de  lentejas 37 

ti    de  garbanzos. 37 

ii    de  pailas. 37 

Otro 37 

.i 38 

„ 38 

COCIDO  O  PUCHERO  COMÚN. 

Puchero  español 39 

Olla  podrida 40 

Cocido  de  verdura 40 

ii      ó*  puchero  de  enfermo 40 

tt       restaurante 40 

ii      á  la  francesa 41 

Olla  cubana 41 

LA  OOTUNBRA  POBLANA. — TOM.  I. — 25¿. 


394 

rXcw. 

Olla  podrida  mexicana. 42 

it  ó  cocido  veracruzano 42 

POTAJES. 

Potaje  de  garbanzos 43 

•f      de  garbanzos  coa  arroz.  43 

*'    de  garbanzos  con  espinacas 43 

»•    de  fríjoles  blancos     .......  48 

m    de    chícharo»      ..'"..'.  43 

n    de    lentejas. 44 

n     de    coles 44 

ii     de  nabos 44 

it    de  espinacas. 44 

•i    de  castañas 44 

SALSAS. 

Salsa  á  la  prorenzal 44 

ii    suprema. 45 

ii    de  manteca  negra 45 

Otra  salsa  de  manteca  negra 45 

Salsa  holandesa 45 

i*    general 45 

ii    común                               , 46 

Otra , 46 

, 46 

Salsa  picante 4C 

ii     de  mostaza 4* 

m     mahonesa 4* 


3» 

■     FÍG& 

Salsa  indiana 47 

española 47 

de  piñones 48 

de  almendras 48 

de  avellanas,  de  nueces,  etc.       ....  48 

do  perejil  á  la  española 48 

de  acederas 48 

amarilla. 48 

de  jitomate 49 

española  á  lo  aldeano 49 

española 49 

blanca 49 

blanca 50 

picante .  60 

de  anchoas 50 

de  pepinillos  en  vinagre 50 

de  vinagre 50 

de  laurel 50 

deRobert 51 

común 51 

del  jefe 51 

Pebre. ♦  51 

Salsa  de  pobre 51 

ti     de  crema 52 

v    especial,  llamada  maitre  d>hotel  ....  52 

ii     para  toda  clase  de  manjares o2 

Rojo  para  las  salsas 52 

Salsa  llamada  Bechamel o2 

ii     criolla oH 

»»     de  vinagre  criolla 53 


896 

FACS. 

Salsa  para  bacalao 53 

Otra  para  pescado  llamado  de  la  Sra  Guerin  53 

Otra 54 

Salsa  para  bobos 54 

ii    para  lengua 54 

Otra  para  sesos                           54 

Salsa  a  lo  goajiro 54 

ti    blanca  á  la  cubana 54 

ii    picante  á  lo  cubano 55 

ii    habanera  cruda 55 

Mezcla  para  espesar  las  salsas 55 

Salsa  remolada 56 

ii    de  ravigote 5G 

ii    de  jitomate  con  mantequilla 5(5 

ii    mayonesa  y  bayouesa 57 

Otra 57 

Salsa  para  pescado  ó*  bacalao 58 

ti    ordinaria  para  pescado 58 

ii    de  jitomate  á  la  italiana 53 

Otra  salsa  á  la  maitre  d'hotel 50 

Observación  importante  sobre  el  modo  de  espesar 

las  salsas 59 

CARNES. 

Modo  de  ablandar  la  carne  antes  do  prepararla .       .  59 

Biftek 59 

Otro 00 

Biftek  con  cebollas 69 

i?     con  salsa  de  anchoas 61 


397 

pAr.s. 

Biftek  con  jitomates 61 

ti       del  momento til 

Receta  de  Biftek  .  ." 61 

Otro  de  naranja 61 

Biftek 62 

Otro 62 

Modo  de  ablandar  la  carne 62 

Vaca  á  la  moda 63 

ir    en  salsa  aspesa 63 

it    mechada 63 

Lampreado  de  vaca 64 

Pulpa  cíe  vaca 04 

Otra  pulpa 64 

ii   guiando  de  pulpa,  llamado  de  regalo  .  64 

Fricando  seco  de  pulpas  de  ternera       ....  65 

Vaca  con  yerbas 65 

•'    guisada 06 

ii    en  pepitoria 66 

Guisado  do  carne  cocida  antes 66 

Otro  guisado 66 

Otro 67 

ti    en  eructo o< 

it    de  naranju  agria 67 

Vaca  compuesta  á  la  reglana 68 

ii    en  venazon 68 

Otra 68 

Vaca  escabechada 60 

Otra  vera cru zana 69 

Vaca  aprensada 70 

Otra 70 


306 

FJlOft. 

Otra  vaca  aprensada 71 

Filete  con  mantequilla 71 

Otro  filete 71 

Otro 72 

ti 72 

Rosbif 72 

ii    inglés 73 

ii    francas 73 

Lomo  de  vaca  en  asador 73 

ii     de  vaca  mechado  en  asador 73 

ii     de  vaca  en  legumbres 74 

•i    á  la  alemana. 74 

Otro 74 

Picadillo  de  vaca 76 

Espaldilla  de  vaca. 75 

Estofado  de  vaca 75 

ii       de  vaca 75 

it       catalán 76 

n       de  pulpa. 76 

i.       de  biftek .  76 

Otro  de  jitomate  fingido 77 

Estofado  á  la  cubana 77 

ii      isleño 78 

ii      bayamés 78 

Ropa  vieja  de  vaca 78 

Otra  ropa  vieja 79 

Lengua  de  vaca  en  papel 79 

ii    de  vaca  al  Gratín 79 

ii     en  besuguera 79 

rr     de  vaca  á  lo  marinero 80 


399 

Lengua 80 

it      guisada 80 

Otra 80 

Lengua  en  estofado 81 

it      de  vaca  mechada  y  en  Balsa      .       .       .       .  81 

n      de  Taca  en  pepinillos    ......  81 

m      á  la  gallineta 82 

Paladar  de  vaca  en  salpicón     ......  82 

*•       de  vaca  á  la  casera      ..'....  82 

f»       de  buey  en  las  parrillas     .....  83 

u       de  buey  frito 83 

Callos.  — Vientre  de  vaca  á  la  leonesa   ....  83 

Callos  con  mostaza 83 

Cola  de  vaca  rebozada.       .......  84 

Riñon  de  vaca  á  la  casera 84 

Hígado  de  vaca  á  la  casera. 84 

Buey  cocido  á  la  gallineta 84 

rt    á  la  moda     .........  85 

Encebollado  de  carne 85 

Sesos  de  vaca  6  ternera 86 

ii    con  pan  rallado 86 

Otro  de  sesos  con  harina 86 

Camas  infurtidas 87 

CARNERO. 

Cualidades  higiénicas  de  la  carne  de  carnero  .  88 

Carnero  guisado 88 

Otro 88 

Guisado  de  carnero  con  granada 89 


400 

Guisado  de  carnero ** 

Jigote  de  carnero  aaado HH 

Solomillos  de  carnero  ....  qq 

0tro .'.'."!  90 

". 90 

Guisado  de  carnero 90 

Carnero  guisado 9^ 

Guisado  de  carnero  con  su  sangre 91 

Carnero  verde.      .  * 91 

Carnero  verde  peruano 92 

Solomillo  de  carnero 92 

»»        de  carnero  con  legumbres      ....  92 

•»        de  carnero  A  lo  corso 92 

Espaldilla  de  carnero  asada 93 

Costillas  de  camero 93 

OtnB 93 

Otro  modo 93 

Otras  costillas 94 

Lonjas  magras  de  carnero  ó  ternera      ....  94 

Despojos  ó*  menudos  da  cordero 94 

Pecho  de  carnero 94 

Pecho  de  carnero  sobre  la  brasa 95 

n      de  carnero 95 

Panza  de  carnero  rellena 95 

Menudo  de  carnero % 

Otro  menudo 97 

Otro 97 

Otro  de  carnero 97 

Otro  mas  de  carnero 98 

Pierna  de  carnero.  —Modo  de  prepararla     ...  98 


401 

pÁr.s. 

Pierna  de  carnero  asado -00 

Otra  pierna  de  carnero 99 

Pierna  de  carnero 99 

n      de  carnero  mechada 100 

ii      de  carnero  á  la  inglesa 100 

ti      de  carnero  con  papas 100 

ii      de  camero  en  asador 100 

ii      de  carnero  cocida 101 

?f      de  carnero  estofada                    .-  101 

Picadillo  de  carnero  con  huevos 101 

n        de  carnero  asado 101 

it        de  carnero 102 

Ríñones  guisados 102 

Otros .102 

Ríñones  de  carnero  salteado  102 

ii       de  carnero 103 

•t       de  carnero  asado 103 

Sangre  de  carnero 103 

ii      de  carnero 103 

i?      de  carnero 104 

Mollejas  de  cordero 104 

Bofes  gustosos 104 

Hígado  de  carnero 105 

Sesos  de  carnero 105 

Pepitoria  de  hígados  y  bofes  de  cordero  y  cabrito .  105 

Chanfaina  105 

Asadura  llamada  gandinga. 105 

Otra  á  la  mexicana 105 

Asadura  de  carnero  en  crudo 106 

Otra  asadura  de  carnero 106 

LA  OOW9BRA  POBLANA Tu*  i — 26. 


» 


408 

^  P-ÍQ8. 

Otra 106 

» 107 

Mondongo 107 

ti        á  la  italiana. 107 

o        á  lo  campesino 107 

106 

Otro  mondongo 106 

Manos  do  «amero  á  la  casera 106 

ii     de  carnero -con  salsa  italiana  á  otra  .  109 

ti     de  carnero  con  yerbas  finas 109 

Colas  de  carnero 109 

H    de  carnero  fritas. 109 

ii    de  carnero  en  parrillas 109 

ii    de  carnero 109 

Cordero  á  estilo  del  campo 110 

Pebre  de  carnero 110 

Patas  de  carnero  i  la  casera 110 

ii     de  carnero  marinadas  y  fritas      ....  111 

•i     de  carnero  i  la  gallineta. 111 

Caben  de  carnero 111 

ii      de  cordero  ó  cabrito 112 

ii      de  carnero 112 

Albóndigas  de  carnero. 112 

Albondiguillas  de  carnero  fritas 112 

Albóndigas  de  carnero 113 

Lengua  de  carnero 1L3 

•i      de  carnero  en  parrilla 113 

Criadillas  de  carnero  fritas 114 

Otras  criadillas  de  carnero 114 

Fricando  de  carnero 114 


4ftS 


TERNERA. 

Ternera  asada 114 

Trozo  de  ternera  á  la  provenal  115 

Guisado  de  ternera. 115 

Otro 115 

Guisado  de  ternera 116 

n       de  ternera  llamado  de  dañantes    .  116 

Ternera  con  salsa  blanca 116 

ti       estofada 116 

Otra  estofada 117 

Otra 117 

Otra  estofada 117 

Fricando  de  ternera »"  117 

Otro  fricando  con  acelgas 118 

Fricando  seco  de  ternera  con  quelites  ....  118 

Hígado  de  ternera  á  la  italiana 119 

m      de  ternera  en  asador 119 

n      de  ternera  en  sartén 119 

n      de  ternera  en  masa 119 

Costillas  de  ternera  en  asador,  á  las  yerbas  finas.  119 

n       ál&mUanesa 120 

(?       con  chícharos. 120 

empapelsdas 121 

¿d  ternera  a!  natural 121 

asadas  con  pan  rallado 121 

i»        :*c  ternera  A  la  pe  pillóte 121 

•  ,-f*  rcriicrn  emi\  y.r¡o  *^^g.        .        .         .  *••?• 

*      *  i  .*#  i 

'•:    ......\Ji     lí:-.     ¡i. .•>:«»    .  .' _  • 


4*4 

PÁGS. 

Costillas  de  ternera  en  papel 122 

h      de  temerá  en  yerbas  finas.  122 

ii      á  la  leonesa 122. 

•i      de  cerdo  en  parrilla 122 

H      de  carnero  con  salsa  de  j  i  tomate  122 

»»      empanadas 123 

ii       mechadas 123 

m      caaeras. 123 

n      con  vino 123 

m      tostadas 123 

ii      de  ternera  empapeladas 124 

ii      en  sartén 124 

m      á  lo  cocinero 124 

ri      con  lenguas 124 

ti      empanadas  y  tostadas 126 

ir      empapeladas 125 

ii      en  vino .  125 

Otras  costillas 126 

Otras 126 

..    ............  126 

Otros  con  chícharos 126 

Otras 127 

Costillas  con  pulque 127 

Sesos  á  la  matancera .       .  127 

m     á  lo  santiaguero .  128 

M    á  lo  piíi'im ■ '    .       .       .       .  128 

f»     á  l;w  verncruzana 128 

Sesos  do  ternera  á  la  gallineta 129 

Guisr.do  de  ternera  con  sesos 129 

Sesos  de  ternera  fritos 129 


465 

Sesos  de  ternera  á  la  cubana 129 

ii    á  la  maitre  d'  hotel 130 

Entresijo  de  ternera  á  la  vinagreta.       ....  130 

ii        con  cebollas 130 

ii        marinado  y  frito.  .       .     ' .       .  130 

Meollos  de  ternera 131 

Lomo  flamenco 131 

it     á  la  casera  . 131 

Orejas  de  ternera  fritas      ...."...  132 

ii     de  ternera  á  la  italiana 132 

Cabeza  de  ternera  en  salpicón 132 

ii        de  ternera  á  la  gallineta 133 

Molleja  de  ternera 133 

ii      de  ternera  mechada •  133 

ii      de  ternera  con  yerbas  finas      ....  133 

ii      de  ternera. 133 

Pecho  de  ternera  con  chícharos 134 

Ternera  aprensada 134 

n      fina 134 

n      á  la  escarlata . '     . 135 

Otra  ternera  aprensada 135 

Ternera  mechada 136 

ii        al  asador  con  yerbas  finas 136 

Lomos  á  la  alemana. „  136 

ii         aprensados    .       .       . 137 

n        do  ternera 137 

Otro 137 

Lomo  de  ternera  en  estofado 138 

ii   de  ternera  asado 138 

Hígado  de  ternera  frito 138 


406      . 

Fias. 

Hígado  de  ternera  en  papel 138 

Bofes  de  ternera ISO 

Guisado  de  higadillo* 139 

Bofes  é*  higadillos  verdes 139 

Pecho  de  ternera  relleno 139 

Sartenada,  guiso  de  carne 140 

Albóndiga*  de  ternera 140 

Otras  albóndigas  ..........  140 

Albóndigas  de  ternera. 141 

Lengua 141 

ti 141 

i?        de  ternera 141 

Otra 149 

Otro  de  lengua. 143 

Ríñones 149 

Otros 143 

ir    ríñones. 143 

i. 143 

ASADOS. 

Modo  de  preparar  la  carne  para  asados .  143 

De  alcaparras. 144 

Be  jitomate 144 

De  especias  y  vino  tinto   .                          .       .  144 

De  chile  ancho.                         14¿ 

Asado  derostbeef 144 

if         de  lomo  de  pnercn  relleno 145 

»»         de  costilla*  de  ternera 145 

i*        de  ternera; 14c 


407 

?Xgs. 

Asado  blanco 146 

M      de  tuétano. 146 

ti      de  pierna  de  carnero. 146 

Otro  de  perejil 146 

Otro 147 

Aaado  de  ternera 147 

Ternera  aaada  con  yerbas  finas. 147. 

Asado  de  pecho  de  carnero.  148 

Salazón  de  puerco  por  medio  de  coladura    .  148 

Asado  de  lomo  de  ternera 149 

Solomillo  de  puerco. 149 

Otro  de  solomillo 160 

ii    de  solomillo 160 

n    guisado. ,*      .  160 

ii     guisado 161 

Lomo  á  la  parrilla  de  Jesusita. 161 

it      de  doña  Teresa 162 

it      de  puerco  á  la  bolonesa 162 

Carne  de  puerco  en  aceite 163 

Lomo  de  pobre 163 

Guisado  de  lomo  . 153 

Lomos  en  odobo 163 

Asado  de  lomo  de  puerco 164 

Lomo  de  puerco  relleno 164 

11    de  puerco  enrollado. I64 

11    rellenos 166 

Carne  de  puerco  frita  á  lo  montuno-pinero.  165 

Landrecilla  de  jamón  con  chícharos      ....  166 

Puerco  frito  á  lo  habanero 166 

11      ahumado  de  monte 166 


408 

KÍ08. 

Albóndigas  de  carne  de  puerco 166 

Otras  albóndigas 157 

ti    con  calabacines 158 

ti    albóndigas    ....       p       ...       .  158 

ti    albóndigas  finas 158 

Asadura 159 

it      de  puerco 159 

Maletas  de  lomo   ...             A    x 159 

Costillas  de  cerdo 160 

ti      asadas 160 

ti      de  cerdo  asadas 160 

ti      de  cerdo  en  parrilla,  con  adobo.       .     .       .  160 

m      de  cerdo  en  las  parrillas 161 

Jamón  asado 161 

cocido 161 

al  natural 161 

frito 162 

en  asador 162 

cocido  con  vino  blanco 162 

con  legumbres 163 

frito  con  dulce 163 

abesugado 163 

Otro  jamón  en  pulque.                    163 

Jamón  con  tepache 164 

Magras  con  pulque 164 

ii      aragonesas 164 

Magras 165 

Otras 165 

Magras  de  jamón  rebanadas 166 

n      entomatadas 166 


409 

pi.ua. 

Queso  de  puerco r  166 

Otro  queso  de  puerco 166 

Queso  de  cabeza  de  puerco 167 

Cochinito  en  salchichones -    .       .  167 

Cochinita  de  leche  asada    .......  lí>3 

Otro 1C8 

Lengua  en  vinagre li  S 

ii      de  cerdo   .    •' -.       .       .  líiíí 

ii      de  puerco ICiJ 

ti      con  chícharos 109 

it      de  puerco 169 

Otra • 170 

Otras  claveteadas . .  170 

Pies  de  puerco  ahumados 170 

Otros  en  escabeche 170 

Otros. 171 

171 

Otros  pies  de  puerco  en  escabeche 171 

Torta  de  pies  de  puerco 171 

Guisado  de  pies  de  puerco  llamado  Casóla  .       .       .       171 

Torta  de  pie's  de  puerco 172 

Pies  de  puerco  empapelados 172 

it    de  cerdo 173 

Orejas  de  puerco  fritas 173 

ii      de  cerdo  fritas 173 

H      de  cerdo  á  la  leonesa 173 

ti      de  puerco  con  pan  rallado,  asadas  en  parrilla.       17 4 

Cochinillo  asado 174 

ii        en  salsa. 174 

ii        relleno  en  asado 174 

LA  COCINERA  POBLANA. — TOM.  L — 26  J. 


410 

Cabeza  de  cerdo 175 

ti      de  jabalí    . 176 

Hígado  de  puerco  á  lo  cazador 176 

tt      de  puerco  salteado 176 

EMBUCHADOS. 

Aves  6  morcillas  .                          176 

Quitado  de  ares 177 

Morcilla* 177 

ii        estremenas 178 

»»        de  cebolla .  178 

it        aabadeftas .  178 

ii        catalanas  6  butifarra  negra     ....  179 

ii        estremenas 179 

ii        muy  buenas 180 

ii        en  escabeche 180 

Sangre  de  puerco 181 

Morcillas  de  sal,  cubanas '  181 

Otra  morcilla  cubana 181 

Morcillas  blancas 182 

ti        á  la  francesa 182 

Chorizos  á  la  francesa 182 

ii        ala  italiana 183 

Embuchado  á  la  francesa 183 

Otros  chorizones 183 

Chorizos 183 

Chorizones  jerezanos 184 

Chorizones 184 

Longanizas 185 


411 

Longaniza  Vasta 185 

ti         habanera 185 

»f         cubana. .  185 

it         deVich 186 

Sobreasada  de  Mallorca 186 

Salchichas. .186 

Salchicha  basta .186 

ii        fina.      .      . 186 

Salchichas  aromáticas 187 

Salchicha  blanca 187 

Butifarra 187 

Salchichón 187, 

De  otro  modo 187 

Salchichones -.188 

Salchiohon  á  la  catalana  ó  butifarra  blanca .      .  188 

Butifarras  catalanas 188 

Chorizos  blancos 189 

Otros. 189 

CONEJO, 

Conejo  en  escabecha 190 

Guisado  de  conejo 190 

Otro 191 

ii 191 

tt    de  conejo 191 

»    con  su  hígado 191 

Conejo  guisado 191 

Picadillo  de  conejo 192 

Conejo  en  fricase' 192 


412 

TÁGB. 

Conejo  en  escabeche 192 

Croquetas  de  conejo 192 


LIEBRE. 

Liebre  á  la  casera 193 

ir      en  asador      .  ...  193 

n      en  estofado  á  la  española. 193 

m      en  estofado  4  la  francesa 194 

h      guisada 194 

ti     guisada  m 194 

Q;iza|h>  guisado 194 

Ga&ipos'i'ii  chícharos 195 

Asado  du  venado  .  * 195 

Qdisio  íltí  veñudo 195 

Castillas  de  venado 195 

GviUo  de  venado 195 

Espaldilla  de  venado 196 

Guisado  de  cabrito 196 

•  •       •  » 

Otro  em  jumado 197 

Asado  de  cabrito .  197 

Cabrito  epigramático 197 

ti 198 

Espinazo  de  chivo. 198 

Lengua  de  cabra  en  aceite  y  vinagre     ....  198 

Ubres  de  cabra  en  aceite  y  vinagre 198 

Otras. 198 

Guisado  de  ubres 199 

Qtras 199 


413 


AVES. 

PAGS. 

Guisado  de  pollo  con  huevo     .             .             .       .  199 

Otro  de  pollos  con  huevos 200 

»    con  higaditos ' .       .  200 

rf    con  papas 200. 

ti    con  alcaparras    .'...*...  200 

ti    de  tomate 201 

ii     con  zanahoria 201 

ti    con  tomates. 201 

ii    con  almendra 202 

ii    con  avellanas 202 

ii    con  mostaza -.       .  202 

ii    con  sAitunas '  203 

ii    con  harina 203 

H    con  nueces 204 

Guisado  du  pollo  en  olla 204 

ii       de  pollo 204 

Otro  do  pollo 204 

Guisado  de  pollo  con  chícharos 205 

Otro  de  pollo 20o 

Pollo  brincado ¿0o 

Guisado  de  pollos  rellenos 205 

ii    de  pollos  con  las  menudencias    ....  206 

Pollos  con  arroz  á  la  catalana,  llamado  del  cazador .  206 

Guiso  de  pollos 207 

Pollos  fritos 207 

ti      asados 207 

ii      con  jitomate 208 


414 

íloe. 

Pollos  de  carretero 208 

»?    en  salea  de  jitomate 208 

tt    con  anchoas.  208 

n    en  vino 209 

ti    con  coliflor '    .  209 

n    guisados  á  la  habanera           209 

t»    guisados  á  la  cubana 209 

Guisados  de  pollo  francas  llamado  sauté*  210 

Pollos  con  aceitunas 210 

Pollos  borrachos 210 

tt    moriscos. 210 

Capón  asado 211 

tt    en  arroz. 211 

tt    en  sal  gorda. 211 

tt    cocido ♦      .  211 

tt    mochado 211 

tt    relleno 212 

Gallina  aaada 212 

Pepitoria  de  gallina 212 

tt        menudillos  de  gallina,  etc.      ....  213 

Albóndigas  de  gallina,  etc 213 

Gallina  en  pebre 213 

ti    con  arroz 213 

tt    con  cebollas 214 

Gallina*  fritas  en  adobo    • 214 

Croquetas  de  gallina,  ato  .......  214 

<*!*!!•>'»    *  h  marengfo 216 

'»»     .     •  »  2IB 

O.-.íin.a  en  a.i-iU  i»»?» 215 


416 

Gallina  dorad* 2lG 

Gallina  á  la  tai  tara 216 

Croquetas  de  gallina 210 

Relleno  para  gallina 217 

Aaado  de  gallina 217 

Gallina  con  arroz  a  la  pinera    ....:.  217 

?i       á  lo  vuelta  abajo 218 

ti    •  de  Guinea  en  pebre  ...  218 

11      chilena 218 

Gallinas  gachupinas    . 219 

11      cautivas. 210 

11      en  espinaca» 219 

Pichones  á  la  casera 220 

11      en  adobo 220 

11      guisados 220 

Otro  modo 220 

Pichones  con  chícharos 220 

Otros 221 

Pichones  asados 221 

11      á  lo  marino 221 

11      rellenos 221 

Guisado  de  pichones 222 

Otro  de  pichones  con  nabo 222 

11    con  su  propia  sangre 222 

m    con  harina  y  huevo 223 

it    de  pichones  con  huevo 223 

n    con  culantro. 223 

Pichones  en  vino 224 

Guajolote— Advertencia 224 

Sangre  de  guajolote 224 


416 

fíqb. 

Queso  do  guajalote 224 

P»*P'»jr*  4  higadillos  de  guajolote 225 

I  mijos  de  guajolote    ' 225 

_.     j  i'iu  coiid.uient«do  con  su  propia  grasa      .       .  225 

Picadillo  do  guajolote 22(5 

Guajolote  sisado 22(5 

o    .    relleno 220 

o         en  papel 220 

Pepitoria  de  guajolote 220 

Alone*  de  guajolote  á  las  yerbas 227 

Pipila  en  asador 227 

Guajolote  en  adobo 227 

Pipila  á  lo  casero 228 

Despojos  de  guajolote 228 

Menudillos  de  guajolote  á  la  casera      ....  228 

Menudillos  de  guajolote  á  la  judía      ....  229 

Guisado  d*i  pato 229 

Otro  de  pato 229 

ti    de  pato 290 

Escabeche  de  patos 230 

Pato  en  asador 230 

Pato  en  aceitunas 230 

ii    en  nabos  á  lo  casero 231 

n    en  chícharos  y  otras  legumbres      ....  231 

Ganso  en  asador 231 

ii      relleno  y  asado  á  la  inglesa 231 

o      relleno  de  castañas  y  asado 232 

o     en  adobo 232 

o      para  viajeros 232 

Guisado  de  agachonas 233 


Otrv  di»  *g***huuAU              233 

Tórtolas  al  minuto 253 

it      al  salmorejo  á  lo  casero 233 

Tórtolas 234 

Palomas  torcazas 234 

Guisado  de  churlos  234 

Otro ".       ,  234 

Chorlos  rellenos 234 

r.      asados             .  ^   .  236 

Codornices  en  chícharos 235 

n         asadas. 235 

Tordos  á  la  inglesa 235 

•t    en  escabeche 235 

Guisado  de  perdices 236 

ti        de  perdis  ó  gallina  guinea.       ....  236 

Boyeros  ó  codornices 236 

Perdiz  a  la  catalana 236 

m     eu  asador 237 

Perdices  rellenas  asadas    .......  237 

it       en  parrilla 237 

Picado  de  perdices £37 

Perdices  á  la  inglesa 238 

Salmorejo  de  perdices 238 

Perdices  con  criadillas. 238 

Codornices  y  perdices  asadas 238 

Perdices  asadas  con  sardinas 288 

tt        en  salsa 239 

•i        estofadas 239 

n              ii        á  la  española 239 

De  otea  modo     .       .       .       .       „ 239 


Quitado  de  perdices  y  codoruiceit 240 

Frito  de  pájaros 240 

Aves  fritas  en  adobo 240 

Croquetas  de  aves 240 

Pepitoria  do  menudillos  de  ave 240 

Albóndigas  de  ave 241 

Higadillos  do  ave  con  arres 241 

Salpicón  de  aw ^ 241 

Torrajss  de  ave» 241 

Cresta*  y  ríñones  de  aves 241 

Guisad»»  de  higadillas 242 

Advertencia 242 

PESCADOS. 

Bacalao  guisado 243 

-r     ¿la  maitre  d'hotel 243 

ii      á  la  provenzal 244 

Otro  4  la  provenas! 244 

^aoalao  á  la  provincial 244 

*      ii      común 246 

Otro 245 

Bacalao 246 

•» 246 

Otro 240 

Bacalao  a  la  vizcaína 246 

Otro  modo 246 

Bacalao  con  papas 247 

De  "tro  modo.             * 247 


1» 


ir 


í'.úm. 

Bacalao  en  blanco 247 

Bacalao  en  cazuela 247 

»»      con  cebollas 247 

*•       rebozado  y  guisado 248 

«t       guisado  de  otro  modo 240 

•'       al  estilo  de  Krancia 248 

m       rebozado 248 

"       al  estilo  de  arriero 248 

»»       á  lo  marinero 249 

••       con  leche 249 

con  almendra»  y  piñonea 249 

con  coliflor 250 

ti       en  albóndiga* 260 

Agujas  de  bacalao  fritas 200 

Bacalao  al  estilo  de  la  Costa  de  Sotavento  .  250 

Albóndigas  de  bacalao  fritas 25i 

Bacalao  con  papas  á  lo  canario 251 

m       á  lo  limeño 252 

á  la  veracruzaua 252 

*•       á  lo  cnmagüeyano 252 

,.       de  Celis     .       .       .  N 258 

Bobo  empapelado 253 

n     guisado \  253 

».     frito 254 

m     rellenos  y  asados 254 

»i     con  mostaza 254 

Otro  de  bobo 254 

Otro  bobo  fresco 255 

Bobo  en  aceite  y  vinagre 255 

Orro  do  bobo «■ 25» 


40* 

rÁu*. 

Bobo*  en  caldo 356 

Otro  de  bobo 266 

Caldillo  pera  bobos  cocidos      ....  366 

Guisado  de  bobo 366 

Bobee  en  estofado  á  la  moda  de  tierra  caliente  .  267 

Robalo  con  vino  Jerez. 267 

Otro  con  cebolla 267 

Otro  robalo  de  rueda 367 

Robalo  de  rueda  6  frescal 268 

Otro  robalo 268 

Robalo  con  jitomate 269 

if      de  rueda 269 

Bagre  con  aceitunas 269 

it      adobado 260 

ii      en  ajo  comino 260 

Bagre 260 

Otro 260 

Bagre  escabechado 261 

Otro  bagre 261 

Bagre  en  jitomate 261 

Ostiones ^2 

„ 263 

Otros  ostiones 263 

Otro  de  ostiones 263 

Otros .263 

Ostiones  en  concha 263 

ii      á  la  italiana 264 

»i      en  jigote ^64 

i!       en  guiso  de  empanada 264 

Oftiones ^** 


431 

Ostiones 265 

•i      en  sus  ooncbas 205 

Otros. 265 

Ostiones  en  sartén   • 266 

it      en  leche 266 

Ostiones 266 

•i      en  caldo 266 

i»      fritos. 266 

Otros 267 

Ostiones 267 

ii      marineros 267 

ii      en  pamik 267 

Mojarras 267 

Otras. 267 

Salsa  especial  para  mojarras 268 

Mojarras  con  sus  huevas 268 

Otras  mojarras 268 

Mojarras 269 

Pámpano  relleno 269 

Otro 270 

Salsa  para  dicho  pámpano 270 . 

Lisa 270 

Otra 271 

Otra 271 

Lisa  fría 271 

ti   asada 271 

Camarones 272 

ii        frescos  ...» 272 

Quiso  de  camarones 272 

Camarones  en  cortadillo  de  huevo 272 


A22 

PÁUft. 

Hueva 273 

•t       >isa  da 273 

Guisado  de  hueva 273 

Hueva  en  ensalada 274 

PESCADOS  EN  GENERAL. 

Pescado  con  chícharos 204 

Otro  pescado 274 

Pescado  á  la  minuta 276 

••      en  salsa  amarilla 276 

••       asado 276 

Otro  con  jitomate 276 

Pescado  enharinado 276 

M      en  caldo  de  pobre 276 

••      con  chile  ancho 276 

Otro  con  chile  ancho 276 

Otro  de  pascado 277 

Guisado  pañi  pescado 277 

Otro 277 

Escabeche  de  Veracruz 277 

Otro 278 

Escabeche  de  pescado 278 

Salsa  para  pescarlo  con  salsa  de  anchoas  378 

Pescado  a  la  bayoneta. 279 

ti      al  uso  de  los  pescadores 279 

ti      alcaparrado 279 

Albóndigas  de  pescado 279 

Otro  pescado 280 

Pescado  asado 280 


Pencad*  eu  aceite . 

ii      escabechado 

fi      en  salsa 

ti       con  »al&a  de  avallan;* 
Alb  >ndii>|iil!K4  de  j>s  'nd<>. 
M  >do  de  cocer  con  |»«»ew  cuido  los  pescados. 
Adobo  para  peces  de  todas  clases    . 
Caldo  corto  de  pescados 


..  :i8U 
2HI> 
281 
231 
231 
281 
282 
282 


TORTAS. 

Modo  de  formar,  hacer,  cocer  y  servir  toda  clase  do 

tortas  sean  de  carne  6  vigilia.  - 

Torta  de  guajolote 

Otra  de  pollo  tapado  y  relleno 

Otra  de  gallina 

Otra  de  pollos  escondido* * 

Torta  para  pollos,  partido  ó  tortitas  de  camarón 

Otra  de  pichones « 

Torta  de  carne 

Otra 

Torta  de  jigote      ..*..'«•• 

•i      de  revoltillo 

Otra  de  pies  de  cerdo 

Otra  de  camarones 

Otra  con  pescado  ó  camarón 

Otra  de  camarón 

Torta  de  sardina 

•t      de  verduras .  

»      de  calabacitas * 


282 
283 
284 

284 
285 
285 
280 
286 
287 
287 
287 
288 
288 
288 
289 
289 
289 
290 


«fcá 

rat*. 

Torta  de  col 990 

m     de  verdolagas 390 

ft     de  p*p«.s            é 291 

Otra 291 

Otra  de  papa*  frita»    ......  291 

Torta  de  perejil 291 

«•     de  oebolla 291 

>»     de  chícharos      ........  292 

Otra  de  calabacitas 292 

Torta  d«j  zanahorias 292 

Otra  torta. 292 

Torta  cuajada. 292 

•i     al  natural 292 

»•     ala  francesa 293 

i*     de  yerbea  finas 293 

m     de  riñon  de  ternera 293 

De  otro  modo 294 

Torta  de  tocino 294 

ii    francesa 294 

»i   de  arros 294 

Otra  torta  de  arros 295 

Torta  de  arros  á  la  Morisqueta.                           !*  296 

Otra  de  arroz. 296 

Torta  de  arroi  con  camarones 296 

Torta  guisada» 296 

Otra  de  sesos 297 

Otra  de  pies  y  lengua  de  cerdo 297 

Torta  de  jamón 297 

•i     escondida  de  puerco.  297 

»»     de  ave 297 


425 

Torta  de  caza 298 

•i    al  natural 298 

FRITURAS. 

Frituras  <le  senos 299 

m        de  papas 299 

<  >tra  fritura  ele  papas  ........  299 

m    de  sesos  y  pechuga  de  gallina 300 

Fritura  de  sesos 300 

Fritura 300 

Otra 300 

Fritura  de  sesos  y  papas 300 

HUEVOS. 

Huevos  en  el  platón 301 

ti       en  camisa. 302 

302 

Otros  huevos 302 

Huevos  saltados 302 

Potaje  de  huevos 303 

Otro  de  huevo 303 

Huevos  guisados 303 

it      estrellados  son  salsa 304 

•i      con  jitomates 304 

•i      revueltos  con  jamón 304 

ii      al  raspado      ........  304 

ii      rellenos 304 

H      a  la  nieve 306 

f.A  COCINERA  POBLANA TOM  1 — 271. 


426 

Huevos  en  albondiguillas 305 

•i      mejidos 305 

>•       estrellados 306 

»»       en  mantequilla  arrebatada 306 

•t       pasados  por  agua 306 

De  otro  modo 306 

Huevos  con  queso 307 

♦•       blandos 307 

•i      compuestos 307 

m       on  baturrillo 307 

>i       de  vario»  modos 307 

Huevo  monstruo 306 

Huevos  duros 308 

ii      revueltos  con  jitomate 306 

ii      con  cebolla 308 

ii      escalfados. 308 

ii      rellenos  guisados 308 

••      con  perejil 309 

ii      con  leche .             .  - 309 

De  otro  modo 309 

Huevos  en  espuma 309 

ii      fritos 310 

De  otro  modo 310 

LEGUMBRES. 

Papas  á  la  parisiense 310 

•i      cocidanal  ¿vapor 310 

•i      á  la  Naneta. 310 

m      á  la  alemana 311 


4¿7 

rÁ«*«s. 

Papas  á  la  polaca 1.1.  311 

en  manteca  quemada 311 

en  sartén 311 

á  la  ama  de  casa 311 

en  gu  i  jado  de  carnero 311 

cou  cebollas 312 

al  blanco 312 

á  la  crema 312 

ala  holandesa 312 

á  la  ban  ngole 312 

en  tocino 313 

con  perejil 313 

en  salsa  blanca 313 

rellenas 313 

eu  ensalada 314 

en  mantequilla 314 

rellenas. 314 

con  chile 315 

guisadas 31o 

para  adornos 31x5 

estofadas 31o 

en  salsa.  31H 

fritas Sltf 

De  otro  medo 31** 

Papas  cocidas 31f> 

•i      rellenas 317 

Arros ....  317 

ir      con  chile  ancho 317 

m      á  la  valenciana 318 

De  otro  modo 318 


428 

l'ÁUS. 

Arroz  en  croquetas 31!) 

"      con  pollo» 31!) 

ti     con  bacalao  seco 31!) 

it      ó  rtsotto  á  la  milanesa 320 

•i 320 

•i     con  pescado  ó  bacalao  á  la  catalana     .  320 

ti      de  pobre 321 

i» % 321 

ii     á  la  italiana. 321 

Alcachofas  fritas 321 

De  otro  modo 322 

Alcachofas  atadas 322 

>t           a  la  pebre ...» 322 

ii           a  la  salsa  blanca 322 

i»           rellenas 322 

••           guisadas 323 

ii           con  tocino 323 

•i           en  dulce 323 

••           heladas 323 

ala  italiana 323 

Ensalada  de  alcachofas 324 

•i         de  alcachofas 324 

Salsa  para  guisarla* 324 

Ensalada  de  alcachofas 325 

Otra  de  alcachofas. 325 

Receta  para  componer  alcachofas 225 

Ensalada  de  coliflor 325 

Otra  ensalada  de  coliflor    , 325 

Coliflor  escabechada 326 

, 326 


420 

r.\<JK. 

Coliflor 327 

Coliflores  á  la  salsa  blanca  6  morena     ....  327 

h        a  la  parmesana 327 

•i        en  ensalada. 327 

Coliflor  frita 327 

m       rebozada  .                      328 

ii       con  salsa  blanca 328 

ti       con  queso 328 

Cnl  rellena 328 

ii    rellena  para  vitualla 32!) 

Coles  rellenas  de  picadillo  como  para  chiles  321) 

H    escabechadas 330 

«i     rebozadas 330 

Knsalada  de  col  oruda :¡30 

Col  borracha 330 

Coles  en  adobo 331 

ii     eri  tocino 331 

i'    á  lo  casero 331 

ti     con  leche 332 

>i     de  Bruselas 332 

»•     rellenas 332 

Calabaza  rehogada 332 

•i        en  guisado 332 

•i        asada 333 

Calabacines  rellenos 333 

Calabacitas  rellenas 333 

Otras  calabacitas  rellenas 333 

Cebolla  en  ensalada 334 

Cebollas  en  vinagre 334 

ii        rellenas 334 


430 

P.MiS. 

Cebollas  asadas 334 

ti      "estofad** 335 

Aceden» 336 

•t        en  jugo 335 

••        en  leche 336 

Frito  de  acederas 336 

Acelgas 336 

Cuajado  de  acelgas,  espinacas  y  escarolas    .  336 

Espárragos 336 

Espárragos  al  aceite 337 

.    ii  á  la  salsa  blanca      .    * 337 

•i  con  chícharos 337 

•i  en  salsa  bianca.  337 

Espinacas. 338 

Do  otro  modo 338 

Espinacas  en  leche 338 

•i        en  jugo 338 

Ensalada  de  escarola 338 

••        de  lechugas 330 

De  otro  modo 339 

Lechugas  picadas  en  jugo 330 

ii        picadas  en  leche 339 

Ensalada  italiana 339 

Ensaladas  cocidas. 339 

Betabel 340 

•i       estofado 340 

».       frito 340 

fi      en  ensalada 340 

Hejotee  en  jugo 340  f 

•t        á  lo  paisano 340 


4íiJ 

F.\i:s. 

tf  ejotes  con  cebolla 340 

ti        rehogados 340 

11        verdea  en  salsa  de  huevos 341 

ii        con  vino 341 

•i        á  la  francesa 341 

n        á  lo  bretón 341 

342 

n        á  lo  casero 342 

ti        verdes  en  manteca  quemada    ....  342 

i.        al  rojo 342 

Frijoles  blancos  a  la  provincial 342 

•i            M       frescos  á  lo  casero 343 

ii            m      ii  la  romana 343 

ii            • 343 

ii        prietos 343 

Otros  frijoles  bayos 343 

Lentejas  a  la  ama  de  casa 344 

ii        á  la  masa 344 

m        oon  tocino  á  lo  aldeano 344 

i         con  perejil 344 

ii 344 

Jitomates  rellenos 345 

i*                ii            345 

Chícharos 345 

ii          con  jamón .  345 

ti         á  la  casera 340 

ti          á  la  inglesa 344» 

m          Hamencos 346 

••          en  azúcar 34ii 

t*          en  mantequilla 341» 


4.12 

PÁoa. 

Chíclmn*  en  leche 347 

Gu iiado  de  chícharo»  en  leche 347 

Guisado  de  chic  han» 347 

Chícharos  en  carne 347 

Habas  verdes. 348 

•t      verdes 348 

m      á  lo  casen».       , :t48 

«t      hurtadas 348 

11      frescas  á  la  catalana 348 

••      tiernas  con  jamón 349 

•1      secas 349 

Zanahorias 349 

»»•          en  salsa  blanca. 350 

11           con  jitomate 360 

»t          en  verde 360 

....  360 

Zanahorias  guisadas 360 

Otras 360 

Zanahorias  con  azúcar 361 

Calabacitas  divinas 361 

Calabaza  apaleada. 361 

Calabazas  cortadas 361 

Calabaza  rehogada 362 

•1        guisada. 362 

Calabacitas  rellenas 352 

Hongos 352 

Otros 352 

Hongos  en  salsa  de  pescado 363 

363 

11 353 


433 

Hongos 353 

Otros  hongos 354 

Cebollas  rellenas 354 

Alverjones 354 

Aceitunas  en  adobo 355 

Salsifíes .       .  355 

Garbanzos  turcos .  355 

ir         guisados 356 

•i         comunes 356 

Cnayotes 35tí 

Berengenas  rellenas 35<* 

m  fritas 357 

ADVERTENCIA 


Sopas  y  cocidos                          357 

Sustancias  y  jugos 357 

Carne  de  vaca 358 

ti      de  ternera 358 

•i      de  carnero 358 

.•      de  cerdo 358 

m      de  jabalí 358 

Liebre 358 

Conejo 358 

Perdices 359 

Codorniz 359 

Pishones 359 

Aves  caseras 359 

Pollos 359 

Gallo  y  polla 359 

LA  OOC1NKBA  POBLANA IOM  I — 28. 


M  I 


4*4 

(■u;ij«»lote  y  pipil* 359 

Itacalao 359 

Habas 359 

Frijoles 359 

Hongo* 300 

IMPORTANTES  PREVENCIONES 

Prevenciones  sobre  ias  sustancias  estimulantes  y  sal- 
sas   360 

Prevenciones  para  hw  fritos 362 

Otro  modo  de  preparar  un  buen  frito    ....  363 

Prevenciones  para  los  asados 364 

Para  los  bifsteks 366 

Modo  de  preparr  las  aves  caseras  antes  de  ponerlas 

á  cocer  d  asar  367 
,  Modo  para  hacer  tiernas  las  aves  de  corra)  que  son 

viejas 367 

Pebre  ó"  adobo  fiara  rociar  los  asados    ....  357 
Medio  para  que  la  carne  salga  tierna  y  blanda  .  3GB 
Medio  para  preservar  pescado  de  la  corrupción  .  368 
Medio  para  conservar  los  huevos  frescos  durante  mu- 
cho tierno* 368 

Otro  modo  para  conservarlos  frescos  mucho  tiempo.  368 

Mudin  uara  salar  la  mantequilla 369 

Modo  para  conservar  fresca  la  mantequilla .  369 

De  otro  modo 369 

Modo  de  derretir  la  mantequilla 370 

I>e  otra  manera  en  baño  de  María 870 


4tt 

Pan  rallado  para  rebozar  coatillas,  pié**  de  puerco, 

etc 370 

De  otro  modo. 371 

Modo  de  conservar  la*  carnes  frescas  en  tiempo  de  ca- 
lor   371 

Otro  m«d»« 371 

Modo  de  hacer  la  conserva  de  jitomates,  que  aconse- 
jamos adoptar,  pues  es  tan  útil  como  ventajoso  pa- 
ra cuando  escasean  los  jitomates 338 

Preparación  de  la  manteca  sin  sal 372 

Derretido  y  purificación  de  las  mantecas  372 

Urbanidad  en  la  mesa 273 

Servicio  de  la  mesa  y  reglas  para  trinchar  debidamente.  381 

ii        pierna  de  carnero 384 

••        espalda  de  carnero 384 

cordero 384 

•i        cerdo  y  jabalí 384 

m        jamón 384 

•r        conejo  y  liebre 385 

••        guajolote,  pollas  y  capones      ....  340 

ti        pato  y  ganso 385 

••        pichones  y  perdices 386 

m        pescados  de'mar  y- de  agua  dulce. .  386 

pastas 386 

frutas 340 

Jfl.V  DRL  INPIUK  DEL  TOMO  FB1MBKO. 


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L.A 


COCINERA  POBLANA 


Y    KT. 


LIBr^O  DE  LAS  FAMILIAS 


XotUIdii»  manual  práctico  d%  ooctu»  wpafioU. 
freaaN».  lauto»  y  mexicana,  hif  leo*  y  •unitomln  douiémtkM 


Contiene  tna*  de  do*  mil  fórmula*  de  ejecución 

sencilla  y  fácil 

Tratemos  especiales  de' Pastelería,  Confitería  y  Repostería 
diversa*  recetas  y  secretos  de  tocador  y  medicina  domestica  para  conservar 

la  salud  y  piolongar  la  oída. 


CUARTA  EDICIÓN  CORREGIDA  Y  AUMENTADA 


TOMO  II 


MÉXICO 

TIPOGRAFÍA  de  ángel  bassols  y  hermanos 

14  Avenida  Oriente,  número  147 

ritgniMl*  <t«  MmuM»  nAmftttt  tí 

1H90 


£8  PROPIEDAD  DE  LOS  EDITORES  A.  BASSOLS 

T  HERMANOS 


COCINA  MEXICANA 


Parte    Segunda 


1,272.  Afole  de  guajolote* — Para  un  guajolote  grande  se 
emplea  una  libra  de  chile  luulato,  cuatro  onzas  de  chile  pa* 
silla  y  otras  cuatro  de  chile  ancho;  si  falta  chile  se  pueden 
aumentar  tres  onzas  mas  al  mulato.  Se  desvena  todo  y  se 
pone  manteca  en  un  sartén  con  poca  lumbre  para  que  ei 
chile  se  dore  poco  á  poco;  se  muelen  tomates  según  la  can- 
tidad de  chile  y  se  muelen  mucho.  A  parte  se  tuesta  en  el 
comal  cuartilla  de  ajonjolí  y  se  muele  en  seco  hasta  que  su-, 
de;  se  dora  en  manteca  un  real  de  almendras  y  se  muelen 
también  en  seco  con  todo  y  cascaras  y  se  juntan  con  el  ajon- 
jolí. Se  hace  cuartos  el  guajolote,  se  lava,  se  seca  con  una 
servilleta,  se  sancochan  en  manteca  las  raciones  á  que  que-: 
den  doradas.  Ei  dia  antes  se  cuece  un  codillo  con  retazos 
de  carne  de  puerco  y  á  medio  cocer  se  baja  de  la  lumbre. 
Al  otro  dia  temprano  se  pone  una  cazuela  con  el  guajolote. 
Cuando  se  quiere  ya  hacer  el  mole  se  pone  ¿  calentar  agua 
en  una  olla  y  ya  que  está  muy  caliente  se  baja.  Se  pone  una 


cazuela  vacía  en  la  lumbre  y  después  que  se  calentó  se  le 
echa  un  poco  de  manteca;  cuando  está  bien  caliente  se  echa 
el  chile  á  que  se  fría  bien,  se  le  pone  poco  á  poco  agua  ca- 
liente y  se  va  desbaratando  con  una  cuchara;  una  vez  que 
está  bien  frito  se  pasa  á  la  cazuela  eu  que  está  el  guajolote; 
del  mismo  modo  se  fríe  el  tomate,  se  desbarata  con  una  cu- 
chara en  agua  caliente  y  se  echa  también  en  la  cazuela  eu 
que  está  el  guajolote.  Con  agua  caliente  se  enjuaga  la  ca- 
zuela en  que  se  frió  el  chile  en  donde  está  el  guajolote;  se 
sancocha  el  codillo  y  los  retazos  con  todo  el  caldillo  que  se 
coció  y  se  deja  dorar  todo.  Se  pone  en  la  lumbre  ya  que  lo 
tiene  todo,  y  se  le  pune  agua  en  cantidad  regular,  pero  que 
no  quede  aguado.  El  agua  se  ha  de  echar  caliente  lo  mismo 
que  el  ajonjolí;  la  almendra  se  desbarata  con  una  cuchara 
y  se  echa  al  mole.  Se  tuestan  en  el  comal  unas  pepitas  de 
chile  y  un  poco  de  unís,  procurando  que  no  se  pase  y  amar- 
gue el  mole,  así  como  un  poco  de  clavo,  canela,  pimienta  y 
un  cuarterón  de  tortilla  dorada  en  manteca.  Todo  se  muele 
coa  agua  caliente  y  se  echa  al  mole  con  sal  aguada. 

Para  que  no  quedo  aguado  el  guajolote  se  saca  del  caldi- 
lio  si  ya  está  cocido  para  que  no  se  desbarate  mientras  el 
caldillo  espesa  lo  necesario. 

1,273.  Otro  mole  de  yiiajolott. — Para  un  guajolote  grande 
se  emplean  una  libra  de  chile  mulato,  tres  chiles  anchos  y 
dos  chilpocles-,  todo  esto  se  desbarata  y  dora  en  manteca ;- 
se  le  agrega  el  tomate  que  se  juzgue  necesario,  que  ha  de 
ebtar  cocido.  Se  muele  el  chile  y  el  tomate  se  remuele  mucho. 
Se  hace  trozos  el  guajolote  y  se  revuelca  en  la  cazuela  con 
el  chile,  debiendo  estar  todo  crudo;  se  pone  ala  lumbre  con 
la  sal  necesaria.    -Se  dan  unos  hervores  al  caldillo  á  parte  y 


después  se  incorpora  con  el  mole  y  el  caldo  en  que  se  coció. 
Se  muele  clavo,  canela  y  pimienta,  un  poco  de  culantro, 
una  cabeza  de  ajo  asada,  un  puño  de  ajonjolí  tostado  y  un;* 
tortilla  dorada  en  manteca.  Todo  se  echa  ul  mole  cuando 
le  falta  poco  para  estar  cocido,  y  cuando  ya  está  se  quitado 
la  lumbre. 

1.274.  Otro  nuAe  de  guajolote. — A  un  guajolote  dos  codi- 
llos de  á  real,  inedia  libni  do  mulato  y  media  de  patilla, 
ocho  6  diez  chilpocles;  antea  de  tostar  el  chile  se  le  quitan 
las  venas  y  las  pepitas,  luego  se  tuesta  sin  que  ac  queme  y 
tolo  el  chilpocle  estará  un  poco  pasado;  ?e  gradúa  como  la 
mitad  de  tomates,  y  se  cuecen;  se  muele  el  chile  y  en  segui- 
da los  tomates,  una  taza  de  ajonjolí  y  media  de  pepitas  de 
calabaza  con  su  cascara;  estas  dos  cosas  en  junto  se  bajan 
con  un  cuchillo  y  sin  limpiar  el  metate  se  muele  clavo,  ca- 
nela, pimienta,  una  cabeza  de  ajo  asada,  un  poco  de  anís  tos- 
tado y  otro  de  culantro  lo  mismo;  se  parte  el  guajolote  -en 
pedazos,  se  lavan,  lo  mismo  que  la  cabeza  y  molleja,  com<> 
también  los  codillos,  se  ponen  eu  una  cazuela  grande  con 
agua  de  modo  que  cubra  la  carne,  se  pone  á  la  lumbre  y  sr 
echa  el  chile  y  los  tomates;  ya  que  hirvióse'  echan  las  espe- 
cias y  pepitas:  si  la  carne  no  esta  cocida  se  le  echa  mas  agua 
y  sigue  hirviendo  hasta  que  quede  blandita. 

1.275.  Mole  de  guajolote.  -Para  un  guajolote  grande  »e 
emplea  libra  y  media  de  chile;  una  libra  será  du  mulato  y 
la  media  se  compone  de  pasilla  y  ancho  por  partes  iguale*: 
se  cájen  unos  tomates  de  color,  pepitas  de  los  tres  chiles, 
un  poco  de  culantro  tostado  6  ajonjolí,  anís  tostado  también, 
clavo,  canela,  pimienta,  una  cabeza  de  ajo  chica  y  todo  e<*- 
to  se  muele  muy  remolido.  Limpio  el  guajolote  se  sancocha 


m  ssiisiM  mmmá 


IiA. 


COCINERA  POBLANA 


Y    KL 


LIBÍ^O  DE  LAS  FA/VIILIAS 


Xorfelnto  manual  practico  de  codita  wyafiola. 
«niiMM.  tn*lc*a  y  mextmna.  higiene  y  eonomla  domAttaa 


Contiene  tnaa  de  dos  mil  fórmula*  de  ejecución 

sencilla  y  fácil 

Tratados  especíalas  de  Pastelería,  Confitería  y  Repostería 
diversas  recetas  y  secretos  ée  tocador  y  medicina  domestica  para  conservar 

la  salud  y  ptolongar  la  sida. 


CUARTA  EDICIÓN  C0RRE8IDA  Y  AUMENTADA 


TOMO  II 


MÉXICO 

TIPOGRAFÍA  DE  ÁNGEL  BASSOLS  Y  HERMANOS 
14  Avenida  Oriente,  número  147 

i¿»o 


12 

ne  que  se  le  eche  Ha  de  ser  sancochad*  con  pepee  cocidas 
partidas  en  cuarterones:  se  sazona  al  gusto. 

1.287.  Afoíe  de  pontífa. — Se  lava  muy  bien  la  pansa  y 
después  se  -pono  á  cocer.  Se  remojan  luego  chiles  mulatos 
con  muy  poca  ceniza  para  que  le  suba  el  color,  y  se  muelen- 
oon  unos  ajos,  unas  pimientas  y  un  pedazo  de  pan  remoja- 
do. Todo  lo  molido  se  fríe  en  bastante  manteca;  ya  que  es- 
tá refrito  se  sazona  e  »n  un  poco  de  caldo  del  en  que  se  co- 
ció el  menudo,  se  p¡ ¿a  é*ste,  y  se  echa  allí  con  garbanzos  co- 
cidos y  se  deja  sazouar  bien. 

Si  se  quiere  que  quede  seco  el  guiso  se  suprime  solamente 
el  pan  y  los  garbanzos  se  echan  en  la  salsa  después  de  fritos. 

1.288.  Mole  prieto,  — A  una  gallina  se  le  echa  medio  de  chi- 
le, un  tanto  de  pasilla,  otro  de  mulato  y  otro  de  ancho;  se 
desvenan  muy  bien  y  se  tuestan,. se  recojen  todos  los  palitos 
y  las  venas  y  se  queman  hasta  que  se  hagan  carbón  para  que 
no  amargue.  Se  le  echan  unos  seis  tomates  y  un  jitomate, 
asado  todo;  se  le  agrega  clavo,  canela,  una  cabeza  de  ajo 
asada,  pimienta  al  gusto,  una  tortilla  quemada  y  molida;  to- 
do esto  se  fríe  mny  bien  y  se  incorpora  al  chile. 

1,280.  Otro  mole  prieto.  — Una  libra  de  chile  mulato  se  des- 
vena y  se  tuesta  hasta  que  tome  color  oscuro,  las  pepitas 
se  tuestan  hasta  que  quedan  prietas,  se  asa  un  poco  de  to- 
mate, una  ó  dos  cabezas  de  ajo,  un  poco  de  ajonjolí  tostado, 
clavo,  pimienta  y  canela,  todo  se  muele  y  se  fríe  muy  bien 
se  le  pone  azúcar  y  sal  al  gusto,  una  tablilla  de  chocolate, 
la  carne  que  sé  quiera,  agua  y  se  sazona. 

1 ,290.  Receta  del  moU  prieto.  —Después  de  cocida  la  carne 
de  guajolote  6  gallina,  se  pone  ¿  quemar  un  tanto  de  chile 
proporcionado  A  la  cantidad  que  sea  de  carne,  unas  pepitas 


>.  13 

del  mismo  chile,  una  cabeza  de  ajo  y  un  pedazo  de  pan;  des 
pues  de  quemado  todo  esto  se  remuele  bien  agregándole  ji- 
tomate, tomates  crudos,  clavo,  pimienta  y  canela  molida,  y 
ya  frito,  se  vacia  la  carne,  y  se  le  echa  á  este  caldo  una  hoja 
dé  aguacate,  y  otra  que  llaman  Santa,  un  pedazo  de  azúcar 
y  sal  al  gusto;  estando  ya  sazonado  se  quita,  y  se  mortaja  un 
poco  de  bizcocho  de  velorio  ó*  catarino,  y  se  le  agrega  con 
ajonjolí  por  encima. 

1.291.  Mole  de  (dmeiidm. — Se  muele  el  chile  y  se  pone  á 
freír  con  todos  los  sazones;  se  le  echa  la  almendra  molida, 
ya  frito  se  le  agrega  la  carne  cocida,  chorizos,  alcaparras, 
aceitunas,  tornachiles  y  almendras. 

1.292.  Mole  tapatio. — Se  tuestan,  muelen  y  fríen  iguales 
proporciones  de  chile  pasilla  y  chile  ancho;  luego  se  tuestan 
las  pepitas  de  los  mismos  chiles  y  se  muelen  con  cacahuates, 
clavo  y  canela;  se  pone  e*sta  á  freir  y  allí  se  deshace  el  chile; 
después  se  le  añade  agua  caliente  y  sal,  se  le  echa  carne  co- 
cida y  se.  deja  hervir;  debe  medirse  el  agua  de  modo  que  no 
quede  aguado. 

1.293.  Mole  de  papa*. — Se  tuesta  y  muele  chile  mulato  y 
tomates  cocidos,  se  frie  y  se  echa  en  el  frito  carne  de  puer- 
co, papas  cocidas  y  en  pedazos,  agua  y  sal  con  unas  pimien- 
tas molidas. 

1 .294.  Mole  de  tamales. — Se  remoja  el  chilpocle;  hervido 
se  muele  con  tomates  cocidos,  se  fríe  con  carne  y  se  hace  el 
mole. 

1.295.  Mole  de  chile  patilla. — Se  desvena  chile  pasilla  y 
se  tuesta  en  manteca  para  molerlo  con  büstante  canela,  clavo, 
un  puñado  de  piñones,  otro  de  nueces  limpias,  otro  de  ajon- 
jolí tostado  y  muchas  almendras;  todo  esto  se  fríe  en  man- 

LA  COCINERA  POBLANA — TOM  II — 2. 


14 

teca  y  después  de  frito  te  le  incorpora  el  pollo  6  carne  de 
puerco  cocida ,  un  terrón  de  azúcar,  tal  y  riño  blano*. 

1,396.  Mole  de  ¿hito  chicharrón.  — Se  pone  á  remojar  en 
agua  caliente  el  chito,  por  un  rato,  deepuea  te  lava  y  ae  po- 
ne á  cocer  en  una  olla  con  agua  y  aal :  ae  mondan  unoa  toma- 
tes, se  laran  y  se  muelen  con  dos  ó  tres  chiles  grandes,  una 
rama  de  epazote,  cominos  y  tres  ó*  cuatn.  dientes  de  ajo:  so 
echa  manteca  en  una  cazuela  y  en  ella  se  fríe  esto,  luego  se 
vacía  la  carne  con  el  caldo  y  se  deja  que  se  sazone;  se  toma 
un  manojo  de  guajes  y  so  marta  jan,  se  echan  en  el  mole  de- 
jándolos hervir  un  rato. 

1 .297.  Mole  ende  de  yol/ t  na .  —  Para  dos  gallinas  se  em plea 
un  almr.U  de  pepitas  de  Tierra  Caliente;  se  pelan  y  doran  en 
manteca  y  luego  se  muelen;  a  parte  se  muele  una  lechuga  y 
chilchotes  zacapaleñoe  para  que  pique:  se  echa  en  la  cazuela 
con  la  pepita  sin  freír,  la  lechuga  y  los  ohilotes;  se  sazona  to- 
do junto  y  cuando  está  se  le  echan  las  gallinas. 

1.298.  Otro  mole  verde. — Cójanse  unos  tomates  de  cascara 
crudos  y  unos  dientes  de  ajo,  se  muelen  y  se  fríen.  Se  echa 
á  lo  molido  carne  de  cerdo  con  el  caldo  en  que* se  coció*  y 
unas  calabacitas  cocidas.  Ya  que  está  sazonado  se  le  agregan 
chiles  verdes  y  yerba  santa,  todo  molido,  y  se  deja  que  den 
unos  hervores. 

1.299.  Otro  mole  verde.  -Se  asa  una  buena  proporción  de 
tomates  de  cascara  y  se  muelen  con  un  buen  manojo  de  e¡»a- 
zote  y  chile  verde,  se  hace  freir  en  manteca  con  agua  su6- 
cíente  y  cebollas  en  gajos;  se  incorporan  chícharos,  liabas 
verdes  y  hejotes,  todo  crudo,  y  se  le  echan  después  unas  cos- 
tillas de  puerco  cocidas  y  fríjoles,  dejándolo  á  fuego  manso. 

1,900.    Mole  amaiillo.—Sii  coje- chile  amarillo  remojado. 


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una  cabeza  de  ajo  asada  y  tomate  cocido;  se  muele  todo,  se 
lo  pone  la  carne  que  se  quiera,  hejotes  6  calabacitas  7  epa- 
zote 7  se  sazona. 

1.301.  Afole  ehichüo. — Chile  mulato  desvenado  7  tostado, 
tomate  cocido  7  ajo  crudo;  se  muele  7  fríe,  se  le  pon«n  una 

6  dos  hojas  de  aguacate  7  carne  de  cerdo. 

1.302.  Mole  de  chilposo  ó  chilposonti. — Se  ponen  á  cocer 
tres  chilpocles  de  los  mas  colorados,  medio  pocilio  de  toma- 
tes de  cascara.  Se  pone  á  hervir  un  pollo  7  luego  se 
desvenan  los  chiles,  se  muelen  con  los  tomates  7  se  fríe 
todo  en  una  cazuelita;  así  que  está  bien  frito  se  echa  en  la 
olla  en  que  está  hirviendo  el  pollo,  se  le  echa  una  ramita  de 
epazote;  si  pica  mucho  se  deshace  una  poquita  de  masa  en 
agua  7  se  le  echa  asentada  cosa  de  un  pocilio  7  se  deja  en 
suficiente  caldo.  , 

1.303.  Mol*  campechano. — Se  tuesta  ohilpoole  dejándole 
pasado  de  -tueste,  se  desvena  7  lava  muy  bien,  cambiándole 
varias  aguas  si  se  quiere  que  no  pique.  Así  que  está  bien  re- 
mojado se  muele  junto  con  jitomates  crudos,  se  fríe  en  man- 
teca agregándole  después  agua,  sal,  unas  ramas  de  epazote 

7  algunas  tortillas  bien  tostadas  7  molidas.  En  seguida  se  le 
ponen  gallinas  ó  las  aves  que  se  quieran,  fritas  en  crudo;  así 
que  están  cocidas  se  sacan  7  rellenan  con  el  siguiente  pica- 
dillo: 

Se  fríe  carne  de  puerco,  se  pone-á  hervir  en  agua  con  sal;  -, 
cuando  está  cocida  se  le  quita  el  agua  7  se  fríe  con  manteca^ 
agregándole  caldo  del  mole  7  unos  huevos  duros,  las  yemas 
enteras  7  las  claras  picadas.  Cuando  está  el  picadillo  seco  se 
rellenan  las  aves  7  se  ponen  en  los  platones,  cubriéndolas 
con  el  caldo  del  mole  espesito. 


•1 . 


1C 

1.304.  Mole  de  chiliepin. — Se  pone  á  remojar  chito  blanco 
desde  la  víspera;  á  otro  dia  se  cuece  junto  con  carne  de  puer 
co  y  calabacitas;  se  asan  los  jitomates,  se  fríe  un  poco  de  chil- 
tepin,  todo  4o  cual  se  muele  junto  y  se  fríe  en  una  cazuela 
con  manteca,  vaciándole  después  la  carne  y  las  calabacitas 
con  el  caldillo. 

1.305.  Cíemele. — Chile  ancho  desvenado  y  tostado,  toma- 
te cocido  una  cabeza  de  ajo  tostada,  tortilla  tostada  y  des- 
pués remojada,  todo  se  muele  y  se  fríe  carne  de  cerdo,  una 
rama  de  epazote  y  se  sazona. 

1.306.  Clemole  de  guajolote, — Chiles  anchos  y  pasillas  se 
desvenan,  tuestan  y  se  echan  á  remojar;  se  molerán  unas  po- 
cas de  semillas  de  unos  y  otros  después  de  tostadas,  y  en  se- 
guida los  chiles,  ajos,  pocos  clavos,  ajonjolí  tostado,  j  en  es- 
te adobo  con  sal»  se  pondrá  el  guajolote  en  cuartos  6  en  pe- 
dazos, en  una  olla  y  al  dia  siguiente  se  le  echará  la  agua  y 
manteca  necesaria,  se  pondrá  al  fuego,  y  cuando,  esté  cocido 
se  le  agregan  tortillas  tostadas  en  la  lumbre  y  bien  remoli- 
das para  que  con  esto  espese,  y  así  que  esté  y  se  vaya  á  ser- 
vir,' se  le  echará  por  encima  ajonjolí  tostado. 

1,807.  Otro. — Almendras,  ajonjolí  y  chiles  anchos,  tcdo 
tostado,  se  muele  junto  con  clavo  y  canela;  se  fríe  en  ¿un- 
ciente manteca  y  sal,  y  ya  frito  se  le  echa  el  guajolote  c:  oí- 
do, su  caldo,  un  poco  de  vinagre  y  azúcar,  y  hervirá  hasta 
quedar  en  buena  disposición;  ni  aguado  ni  muy  espeso,  y 
también  lleva  ajonjolí  tostado  por  encima. 

1,308.  Otro  de  gallina. — Chiles  anchos  desvenados,  trata- 
dos y  remojados,  tortillas  y  ajos  fritos  en  manteca,  ajonjolí 
y  culantro  tostado,  clavos,  pimienta,  jengibre,  cominos,  to- 
mates cocidos,  todo  se  molerá,  se  fríe  en  suficiente  manteca 


17 

con  sal,  y  cuando  esté  se  le  echará  la  gallina  ya  cocida,  pa- 
pad» de  cerdo,  el  caldo,  y  hefvirá  y  se  concluirá  como  loe 
anteriores.  Otro  se  hace  lo  mismo  con  cacahuates  en  lugar 
de  tomates. 

1.309.  Otro. — Desvenados  chiles  negros  y  tostados  en 
manteca,  y  las  semillas  en  comal,  y  tortilla  en  las  brasas, 
clavo,  canela,  todo  molido,  se  freirá  en  manteca  con  sal,  y 
asi  que  esté  se  echará  la  gallina,  su  caldo,  y  quedará  eü  un 
caldillo  regular. 

1.310.  Otro  de  cecina. — Remojada  y  bien  lavada  se  pondrá 
4  cocer  con  agua,  sal,  manteca  y  epazote,  y  ya  que  esté*  me- 
dio cocida  se  freirá  en  suficiente  manteca,  chile  ancho  y  pa- 
silla,  ajonjolí,  todo  tostado  y  molido  junto  con  tomates  co- 
cidos, y  cuando  esté  bien  frito  fe  vaciará  la  olla  de  la  coci- 
na, y  hervirá  hasta  que  espese. 

1.311.  Otro  lomo  ó  espinazo  di  cerdo. — Se  molerán  ajos 
fritos  con  chiles  pasillas  desvenados  y  tostados,  cacahuates 
pan  frito,  clavos,  pimienta  y  cominos;  se  freirá  todo  esto  en 
manteca  en  una  olla,  y  así  que  esté  se  le  echa  agua,  sal  y  lo 
mo  ó*  espinazo  en  trozos,  y  allí  se  cocerá  hasta  quedar  en  un 
caldillo  espeso. 

1.312.  Otra  de  bobillos  de  ternera. —  Limpias  las  patas  de 
la  ternera  y  hechas  trozos,  se  pondrán  á  cocer  en  agua,  ajos, 
sal  y  cominos  cocidos;  cuando  estén  bien  cocidas  se  sacan, 
se  deshuesan  y  se  freirá  en  manteca  chiles  anchos  y  pasillas, 
pan  dorado,  ajonjolí  tostado,  todo  molido,  y  bien  frito  esto 
se  echarán  las  patas;  el  caldo  de  ellas,  calabacitas  cocidas 
rebanadas,  aceitunas  y  chilitos,  y  quedará  en  un  caldillo 
proporcionado. 

1.313.  Otro  de  menudo  de  terne*  a. — Después  de  bien  lim- 


18 

pió  el  menudo,  las  petas  y  tripa  gorda,  se  pondrán  á  cocer  con 
agua  y  sal,  y  cuando  esté*  bien  recocido  ae  freirán  en  mante- 
ca chilee  anchoe  remojados  ^molidos  con  tomates  cocidos, 
pan  frito  en  manteca  y  cominos,  y  cuando  haya  frito  se  le 
agregarán  xoconostles  pelados  (si  se  quiere)  y  se  vaciará  la 
olla  del  menudo;  el  que  con  todo  lo  demás  estará  hecho  pe- 
dazos chicos,  y  A  dos  fuegos  acabará  de  sazonarse;  quedará 
caldoso,  pero  no  aguado,  y  se  le  echatá  encima  ajonjolí  tos- 
tado. 

1.314.  CUmoU  tolitqueüo. — Se  toma  una  gallina;  un  real 
de  lomo  de  puerco,  longanizas,  chorizos  y  ares  ó  morcillas 
dulces.  8e  tuesta  en  manteca  medio  real  de  chile  pasilla 
desvenado;  se  tuesta  un  poco  de  ajonjolí,  almendras  con 
cascara,  pepitas  de  calabaza  mondadas  y  cacahuates.  Se  fríe 
en  manteca  hasta  que  ésta  salga,  y  entonces  se  le  echa  el 
chile  bien  molido.  En  cuanto  todo  está  bien  frito  se  le  pone 
por  dentro  la  gallina,  las  demás  carnes,  caldo,  sal,  y  se  sa- 
zona. 

1.315.  CUmoU — Se  pone  á  la  lumbre  una  olla  con  agua 
y  se  deja  que  dé  un  hervor;  entonces  se  le  echan  huesitos 
de  pecho  de  ternera  y  una  cantidad  igual  de  chile  ancho  y 
chile  pasilla  molidos  y  no  se  espuma  la  olla;  se  deja  cocer  á 
fuego  manso  después  de  echarle  la  correspondiente  sal.  Ta 
que  está  casi  cocido  se  le  añade  una  rama  de  epazote  y  unas 
calabacitas. 

1.316.  CUmoU  mexicano.  — Se  desvena  y  tuesta  chile  mu- 
lato; se  cuecen  unos  tomates,  y  se  muele  todo  junto;  se  po- 
ne á  cocer  con  pecho  de  carnero  y  ya  que  está  cocido  se  frie; 
se  le  echan  calabacitas  en  g*jos  y  se  deja  sazonar  á  fuego 
manso. 


1» 

1.317.  MancJta  mantelo.  — Molidos  chiles  anchos  sin  tos- 
tar (desvenados  y  remojados)  juntos  con  cacahuates,  se  frei- 
rán en  manteca  con  sal,  y  así  que  esté  se  le  agregan  las  aves 
ó  carnes  ya  cocidas,  el  caldo  de  ellas,  rebanadas  de  chorizon 
y  de  plátano  grande,  cebollas  cocidas,  pan  frito  y  molido,  y 
cuando  esté  sera  quedando  algo  espeso. 

1.318.  yiunchn  maníales  del  arriero. — Se  quitan  las  pepi- 
tas  á  unos  jitomates  crudos  y  muy  maduros,  que  so  muelen 
con  chile  seco  remojado,  canela,  clavo  y  pimienta;  luego  se 
fríe  todo  junto,  se  le  echa  agua  tibia  y  los  pollos  ó*  carno 
de  puerco,  chorizos  en  pedazos,  aceitunas,  tornachiles  he- 
chos rajas,  vinagre,  sal  y  un  terrón  de  azúcar,  camote,  plá- 
tano largo,  cacahuates  y  calabaza  de  Castilla. 

1,  »19.  (Hrm  de.  pobre.  -  -Se  dora  pan  en  manteca  y  se  mue- 
le con  chile  ancho  y  jitomates  asados  y  fritos,  ya  que  está 
esta  salsa  mezclada  se  le  añade  caldo,  se  sazona  y  se  le  agre- 
gan unos  cominos  y  ay ocotes. 

1.320.  Mancha  manteles. — Se  rebana  lomo  de  puerco  y 
se  pone  á  cocer,  ya  que  está  se  pone  una  cazuela  con  man- 
teca, se  pica  mucha  cebolla,  ajo  y  jitomate,  se  muelen  dos 
chiles  anchos  y  se  le  echan  especias,  también  se  le  pone  pi* 
ña,  camote,  y  plátano^agregándc  le  chorizos. 

1 .321.  Mancha  manteUA.Se  pone  á  freír  carne.de  puer- 
co: luego  que  está  bien  frita  se  apasta  de  la  lumbre.  Se  mue- 
len bien  unos  chiles  anchos  después  de  estar  bien  desvena- 
dos y  remojados  y  se  fríen  bien;  se  le  echan  unos  jitoma- 
tes colorados  en  proporción  á  los  que  se  necesitan  para  que 
no  quedé  picante  la  salsa.  En  cuanto  está  frita  se  le  echa 
cebolla  en  gajos  grandes,  agua,  sal,  vinagre,  un  poco  de  cla- 
vo, orégano  de  Castilla  refregado  y  se  echa  la  carne  á  que 


20 

cueza  con  unas  rebanadas  de  plátano  y  un  terroncito  de 
azúcar,  se  deja  hervir  y  ha  de  quedar  el  caldo  regular. 

1,322.  Mancha  manteles. — Se  desvena  y  remoja  chile  mu- 
lato, luego  se  muele  con  jitomate,  se  fríe  bien  y  se  le  echa 
agua,  sal,  clavo  y  pimienta  molida,  chícharos  y  he  jotes  co- 
cidos, camote  y  pina  en  pedazos,  la  carne  de  puerco,  un  pe- 
dazo de  azúcar,  tantito  vinagre  y  se  deja  sazonar. 

1,363.  Mancha  manteles  — Se  freirán  en  manteca  ajos 
partidos,  y  se  molerán  juntos  con  chiles  anchos  desvenados 
y  remojados,  jitomates  asados*  y  clavos,  y  todo  se  freirá  en 
la  mauteca  con  sal,  y  ya  .que  está  se  le  echa  la  gallina  cocida 
y  en  cuartos,  el  caldo,  manzanas  rebanadas,  pina  en  trili- 
tos y  cebollitas,  todo  cocido,  y  quedará  después  de  bien  her- 
vido en  un  caldillo  algo  espeso. 

1.324.  Otros.  —Chiles  anchos  desvenados  y  remojados,  se 
molerán  juntos  con  clavos,  ajos  y  jitomates,  y  se  freirá  ce- 
bolla rebanada;  en  estando  se  echa  lo  molido,  y  cuando  es- 
té* se  agregará  la  gallina,  trocitos  de  jamón,  papada  y  lon- 
ganiza, que  todo  se  habrá  cocido  con  la  gallina,  el  caldo  de 
asta  y  orégano,  y  hervirá  hasta  que  esté  en  buena  disposi- 
ción. 

1.325.  Otros. — Se  freirán  en  manteca  ajos  partidos,  y  ya 
dorados  se  molerán  juntos  con  chiles  anchos  y  pasillas  y  des- 
venados y  remojados,  jitomates  cocidos,  pan  tostado  y  cla- 
vos, todo  molido  se  freirá  en  la  manteca  con  sal,  y  en  es 
tando  sé  le  agregan  cebollas  cocidas  deshojadas,  pasas,  al- 
mendras, un  terrón  de  azúcar,  las  aves  cocidas  con  salchi- 
chón, este  rebanado,  el  caldo,  y  cuando  esté  para  apartarse 
se  le  echan  aceitunas  y  chilitos. 

1.326.  Otros  de  poüo  ó  pichones. — Molidos  chiles  anchos 


21 

remojadas,  manzana  cocida,  cacahuates,  ajonjolí  tostado, 
pimienta,  clavo  y  ajos,  se  freirá  en  manteca  con  sal,  y  cuan- 
do está  se  le  agregan  las  aves,  su  caldo,  aceite,  vinagre,  oré- 
gano, plátano  grande  rebanado  y  cebollas  cocidas,  y  que- 
dará como  los  otros. 

1.327.  Oivos. — Chiles  anchos  desvenados. y  tostados,  se 
molerán  juntos  con  almendras,  clavos,  pimienta,  canela, 
nuez  moscada,  ajos,  jitomates  asados,  y  se  freirá  en  mante- 
ca con  sal,  y  ya  frito  se  le  echa  vinagre,  orégano,  azúcar, 
trocí  tos  de  jamón,  manzana,  pera  y  pifia,  todo  cocido,  las 
aves  y  su  caldo,  y  quedará  en  buena  disposición  el  caldillo. 

1.328.  Otros. — Molidos  los  chiles  anchoa  después  de  des- 
venados, remojados  y  con  jitomates,  se  freirán  en  manteca 
con  sal,  y  estando  chino  se  le .  echarán  las  aves,  jamón  en 
tiras,  salchicha  en  trocí  tos  y  chorizon  rebanado,  todo  cocido 
con  las  aves,  el  caldo  de  elfas,  cebollas  cocidas,  manzana, 
durazno,  clavo  y  canela  molida,  vinagre  y  azúcar,  y  queda- 
rá como  los  anteriores. 

1.329.  Otros. — Almendras  tostadas,  yemas  cocidas  y  chi- 
les pastllas  tostados  y  remojados,  se  molerán  con  clavo,  pi- 
mienta y  canela,  se  freirá  en  manteca  con  sal,  y  se  le  echa- 
rán las  aves,  su  caldo,  vinagre,  azúcar,  manzanas  rebanadas 
y  calabacitas  cocidas,  y  se  concluirá  como  los  demás. 

1.330.  Otros.  — Piñones,  jitomates,  ajos,  pan  tostado,  cla- 
vo, canela  y  chiles  anchos  remojados,  se  molerán  y  freirán 
en  manteca  con  sal,  y  ya  (fue  esté  se  ocharán  las  aves,  su 
caldo,  cebollitas  cocidas,  vinagre,  azúcar  y  manzanas,  y  cuan- 
do se  aparte  se  le  agregan  aceitunas. 

1.331.  Otros  de  lomo  de  cerdo. -r-Chiles  anchos  desvenados, 
remojados  y  molidos  con  piñones,  nueces,  jitomates  cocidos, 


23 

pan  frito,  claro  y  canela,  se  freirá  en  manteca  con  sal,  y  asi 
que  esté*  te  le  echará  el  lomo  ya  cocido  con  chorizon  reba- 
nado, jamón  en  tiras,  el  caldo,  pera  y  manzana  rebanada 
cebollas  cocadas  deshojadas,  vinagre  y  asricar,  y  quedará  co- 
mo los  anteriores. 

1,382. -  Otros. — Almendras,  semillas  de  calaban,  pepitas 
de  chile,  ajonjolí,  todo  tostado,  jitomates  asados  y  chiles 
anchos  remojados,  se  molerá  y  freirá  en  manteca  con  sal,  y 
ya  que  esté  se  le  echará  lomo,  choricitos,  longaniza,  todo 
cocido,  calabacitas,  vinagre,  aziicar,  caldo,  y  cuando  se  apar-' 
ta  se  le  echarán  aceitunas. 

1,338.  Pipián.  —Secas  las  semillas  de  calabaza,  se  estre- 
garán con  un  ayate  6  ootense  para  que  se  les  caiga  el  tamo, 
se  remojan  en  agua  de  sal  un  rato,  y  sacadas  se  ponen  á  se- 
car al  sol;  así  que  lo  están  se  muelen  como  el  chocolate  con 
lumbre  debajo  del  metate  hasta  quedar  enteramente  rendi- 
das, y  fritas  en  suficiente  manteca  hasta  haoerse  como  boli- 
tas, se  les  agrega  luego  cominos,  ajos,  chilitos  chiquitos  ver- 
des y  tomates,  todo  prado  y  molido,  y  así  que  se  haya  frito 
y  con  sal  se  le  echa  el  guajolote  ya  cocido  y  su  caldo,  y  her- 
virá hasta  que  quede  algo  espeso.  El  chile  será  el  que  se 
quiera,  pues  solo  es  para  darle  un  poco  de  picante  suave. 

1.334.  Otro  ptfnan. ^-Tostadas  las  semillas  de  calabaza  en 
comal,  que  no  se  pasen,  y  pan  lo  mismo,  se  molerán  las  se- 
millas, con  chile  ancho  tostado,  á  darle  color,  y  ya  coladas 
se  le  echará  el  pan  también  molido,  se  freirá  en  suficiente 
manteca  con  sal,  y  cuando  esté  se  le  agregan  las  carnes.,  cal- 
do de  ellas,  y  ya. que  haya  espesado,  se  aparta  y  se  le  echa 
ajonjolí  tostado  por  enciman 

1 .335.  Otro. —Ya  tostadas  las  semillas  de  calabaza  y  maíz 


23 


prieto,  te  molerán  junto  con  chile  ancho  el  necesario  á  dar* 
le  color,  y  estando  colado  se  freirá  en  suficiente  manteca  con 
sal,  y  así  que  esté  se  le  echará  él  caldo  de  las  aves  6  carnes, 
y  ellas,  6  papas  con  nopales,  ó*  nabos  picados  ya  cocidos  6 
camarones  con  papas,  pues  se  podrá  echar  de  lo  que  mas 
agrade,  y  sea  de  lo  que  fuere  quedará  espeso. 

1.336.  Pipián.  — De  ajonjolí  ó  de  pepitas  de  calabaza.  Des- 
pués que  se  muele  con  chile  tostado  muy  bien  desvenado,  se 
frie  muy  bien  sin  echarle  agua  hasta  que  le  salga  la  manteca  por 
encima,  después  se  le  echa  la  agua  competente,  juntamen- 
te con  la  carne  6  huevos  ó*  camarones  con  sus  nopalitos,- y 
papas,  conforme  al  dia  si  fueren  de  viernes,  y  se  le  puede 
añadir  sus  hojitas  de  ahuautle. 

1.337.  Pipián  verde.. — Se  dora  en  manteca  pepita  de  ca- 
labaza y  luego  se  muele;  se  cuecen  tomates  y  se  muelen  á 
parte.  Se  hace  hervir  agua  en  una  cazuela  y  se  le  va  echan- 
do la  pepita,  que  se  irá  desbaratando  con  la  cuchara,  ya  que 
está  bien  frita  se  le  va  echando  el  tomate  para  que  se  fría. 
Cuando  está  frito  se  le  echa  el  caldo  del  guajolote  y  se  deja 
hervir  un  poco:  se  le  agrega  sal,  la  carne  y  unas  rajas  de 
chayóte  molido  para  que  se  ponga  verde. 

1.338.  Pipián. — Se  tuesta  ajonjolí  y  se  muele;  se  remoja 
chile  en  agua,  se  muele  un  poco  de  tomillo,  unos  bizcochos 
tostados,  unas  pepitas  de  calabaza  y  se  incorpora  todo  muy 
bien,  ad virtiendo  que  las  pepitas  se  han  de  tostar  antes,  y 
se  ha  de  poner  un  plato  de  ellas.  El  chile  después  de  dorar- 
lo en  manteca  se  deslíe  en  caldo  y  se  sazona. 

1.339.  Chiles  en  escabeche.— 8e  desvenan  cien  chiles  cua- 

m 

resmefios,  sin  tostar,  se  preparan  muchos  ajos  sueltos,  to- 
millo, mejorana  y  laurel;  én  un  bote  de  lata  con  tapadera, 


24 

Be  pone  un  poco  de  sal  y  luego  una  capa  de  yerbas  y  otra 
de  chiles;  la  úitima  capa  debe  ser  de  dobles  yerbas  y  cabe- 
zas de  ajo  enteras.  Ya  hecho  todo  esto  se  le  echan  dos  bo- 
tellas de  vinagre  muy  bueno  y-  dos  de  aceite  francés  y  se 
tapa  muy  bien.  Cad*  tercer  diase  mueven  procurando  que 
no  les  dé  el  aire  al  moverlos.  A  los  quince  dias  pueden  co- 
merse y  echarles  sal  si  les  falta. 

1.340.  Otros  chiles  en  escabeche. — 8o  desvenan  los  chiles 
y  se  abren  por  un  Jado  procurando  que  no  se  rompan;  se 
asan  solamente  lo  preciso  para  que  puedan  pelarse.  Se  po- 
ne en  el  fondo  de  una  olla  una  capa  de  chiles  y  cebollas  que 
se  procurará  sean  de  Cholula,  orégano,  laurel,  tomillo,  unas 
pimientas  enteras,  un  poco  de  pimienta  en  polvo  y  sal.  Así 
se  van  colocando  sucesivamente  los  chiles  y  el  recaudo  has- 
ta terminar,  añadiendo  unas  cabezas  de  ajo  á  las  que  se  ha- 
brá hecho  dar  anteriormente  un  hervor  ligero  en  agua  de 
sal;  se  les. echa  aceite  en  proporción  á  la  cantidad  de  chiles, 
por  ejemplo,  para  treinta,  medio  cuartillo  de  aceite  y  me- 
dio de  vinagre.  Se  tapa  la  olla  con  un  lienso  y  se  ata  muy 
fuertemente  y  encima  se  coloca  un  plato  boca  abajo;  se  po- 
ne la  olla  á  la  lumbre  por  espacio  de  hora  y  media  ó  dos  ho- 
ras, á  un  fuego  sumamente  manso;  cuando  están  cocidos  se 
sacan  de  la  olla  y  se  dejan  enfriar  para  rociarles  de  vinagre. 
Guando  se  saquen  de  la  olla  ha  de  ser  con  una  cuchara  de 
palo. 

1.341.  Nogada  para  chiles  con  jamón.  — A  un  ciento  de  n  uc- 
ees un  cuarterón  de  queso  fresco  de  vaca;  después  de  bien 
limpia  se  muele  en  el  metate,  que  ha  de  estar  muy  limpio 
para  que  no  se  corte  la  nuez;  después  se  muele  en  el  mismo 
metate  un  pedacito  de  jamón  gordo  y  unos  dientes  de  ajo; 


-25 

46  le  echa  la  sal  correspondiente  y  se  revuelve  todo  muy 
bien.  Ta  que  está  se  pone  al  borde  de  una  olla  para  que  no 
quede  engranujada.  Con  esto  se  cubren  los  chiles  con  dien- 
tes de  granada  y  perejil  fresco  picado;  si  es  extranjero  es 
mejor. 

1.342.  Nogada. — Se  toman  cien  nueces,  se  mondan  desde 
la  noche  y  se  van  echando  en  agua  fría;  al  otro  dia  se  mue- 
len, y  ya  que  se  bajaron  del  metate  se  muele  por  separado 
medio  queso  fresco,  cuatro  onzas  de  pepita  de  calabaza,  bien 
lavada  para  que  se  le  quite  el  pellejito  verde  que  la  cubre, 
el  migajon  de  una  torta  de  pan  remojado,  una  cabeza  de 
ajo  asada,  cuatro  6  cinco  clavos  y  lo  que  se  coje  con  dos  de- 
dos de  cominos:  ya  molido  se  revuelve  todo  con  la  sal  cor- 
respondiente. Esta  nogada  se  toma  con  chiles  rellenos  de 
picadillo,  pero  se  sirve  separadamente  adornándola  con  dien- 
tes de  granada  y  perejil  deshojado. 

1.343.  Nogada  para  chile»  rellenos. — Para  cincuenta  chi- 
les se  emplean  doscientas  nueces;  se  parten  los  chiles  con 
cuidado  y  se  echan  en  agua,  se  mondan  y  limpian  bien  y  se 
echan  en  una  cazuela  en  agua  limpia;  se  toma  una  taza  de 
nueces  ya  que  están  limpias  y  se  muelen  en  el  metate  á  que 
queden  muy  remolidas;  se  pelan  unos  dientes  de  ajo  y  se 
fríen  en  manteca;  ya  que  están  bien  fritos  se  sacan  y  se 
tuestan,  y  en  la  misma  manteca  se  fríe  un  poco  de  cebolla 
muy  menudita  y  allí  se  echa  la  nuez  á  que  se  fría  bien,  y  se 
le  echa  el  caldo  en  que  se  coció  la  carne  de  los  chiles,  sin 
cargar  los  asientos;  se  fríe  un  poco  el  caldo  y  se  le  echa  agua 
á  que  cubra  los  chiles,  se  le  .pone  un  poco  de  pan  remojado 
y  molido,  un  poco  de  canela,  clavo  y-  pimienta,  todo  moli- 
do, un  poco  de  tomillo  y  otro  de  perejil,  y  se  le  puede  echar 


26 

también  maiixaua  y  du  ruano,  pero,  rebanados;  m  le  agrega 
un  terrón  de  azúcar  y  4in  poquito  de  vino  de  Jerez. 

Con  la  nuez  que  queda  ae  prepara  la  nogada  para  cubrir 
loa  chiles,  y  se  hace  de  la  manera  siguiente: 

Se  remuele  bien  con  un  cuarterón  de  queso  fresco,  un 
terrón  de  azúcar  y  sal  al  gusto;  se  baja  todo  del  metate  con 
un  poco  de  agua  y  se  echa  todo  en  una  cazuela,  se  le  echa 
un  poco  de  aceito  y  se  revuelve  muy  bien  esta  salsa,  con  la 
cual  se  cubrirán  los  chiles  á  medida  que  se  vayan  poniendo 
en  los  platos  para  servirlos;  encima  se  van  colocando  nnos 
granos  de  granada.  Esta  nogada  debe  hacerse  á  la  hora  de 
comer,  pues  si  se  hace  mucho  tiempo  antes  se  pone  prieta. 

1.344.  Chile*  capones. — Se  asan  y  se  limpian;  se  les  qui- 
tan las  venas,  se  les  pone  una  capa  de  queso  fresco  y  una 
hojita  de  epazote;  se  sancocha  en  manteca  y  aceite,  cebolla 
gorda  y  un  poco  de  harina  y  se  deja  que  tome  color,  se  le 
agrega  agua  y  sal,  y  ya  que  hierve  se  le  echan  los  chiles  y 
se  voltean  con  el  cuchillo  para  que  no  se  quemen. 

1.345.  Otro*  chiles  caponen. — Se  escojen  los  chiles  verdes 
grandes,  se  asan  y  se  pelan;  después  se  les  corta  un  poco  mas 
abajo  del  palito  como  á  la  mitad  del  chile,  de  modo  que  no 
se  arranque  la  cabeza  y  se  desvenan  por  arriba:  se  desmoro- 
na queso  fresco,  se  pican  unas  hojas  de  epazote  y  se  revuel- 
ven con  el  queso  triturándolas  bien:  se  rellenan  los  chiles 
por  la  cabeza  pon  el  qu úo  y  se  pone  á  freir  en  manteca; 
cuando  ya  se  conozca  que  están  cocidos  se  sacan  y  se  escu- 
rren; se  bañan  oon  manteca  ó  mantequilla  hirviendo  y  sazo- 
nada con  sal,  unas  tortillas  muy  delgadas  y  después  se  en- 
vuelve en  cada  tortilla  un  chile  y  se  van  colocando  en  un 
platón. 


1.346.  UhiUa  cipoos*. — Chiles  ancho»  de  lus  que  catán 
mejore»,  s*  medio  calentarán  de  modo  que  se  pueda  sin 
romperlos,  desvenarlos  solo  por  un  lado  sin  quitarles^rca- 
bo,  y  ya  desvenados  se  echarán  á  remojar,  se  enjuagan  des- 
pués, se  escurrirán  hasta  estar  oreados,  y  se  rellenan  de 
queso  grande  molido,  que  está  bueno,  procurando  que  nu 
queden  botados,  sino  aplanados;  se  freirán  en  suficiente 
manteca,  y  estando  fritos,  pero  que  no  se  quemen,  se  saca- 
rán, y  en  la  misma  manteca  se  echarán  á  medio  freír  bastan- 
tes cebollitas  ya  cocidas  en  agua  y  sal;  y  cuando  hayan  fri- 
to algo,  se  les  agrega  su  agua,  y  luego  que  suelte  el  hervor 
se  echan  los  chiles  teniendo  cuidado  de  que  no  se  deshagan  ó 
abran,  y  han  do  quedar  caldosos,  por  lo  que  nu  se  echará 
mucha  agua,  sino  solo  la  precisa  para  que  ellos  ablanden, 
y  que  cuando  vayan  á  servir  pueda  quitárseles  á  cada  uno 
el  ollejo  con  facilidad  al  tiempo  de  comerlos. 

1.347.  Rajas  de  chile. — Se  desvenan  los  chiles  en  crudo, 
se  tuestan,  se  pelan  y  hacen  rajas;  se  les  dá  una  enjuagada, 
se  pone  en  una  cazuela  un  poco  de  manteca  y  bastante  acei- 
te y  allí  se  echan  las  rajas  á  freir;  al  estar  medio  fritas  se 
les  echa  un  poco  de  agua,  que  se  deja  consumir,  si  les  falta 
se  les  echa  y  un  poco  mas  de  aceite;  cuando  están  ya  casi  de 
punto  se  rebana  un  queso  fresco  y  se  les  echa». 

1.348.  Chile*  relleno*. — Se  pican  unos  lomitos  de  puerco 
y  se  ponen  á  cocer;  ya  que  están  cocidos,  se  pica  un  poco  de 
ajo  y  jitomate  y  se  fríen:  se  Je  agregan  pasas,  almendras,  al- 
caparr.is,  acitrón,  aceitunas,  manzanas,  plátano  y  choricitoa 
todo  esto  picado  se  le  agrega  á  la  carne;  ya  que  están  bien 
desflemados  y  asados  los  chiles,  se  rellenan  y  se  fríen,  se  ha- 
ce una  salsa  de  jitomate  de  la  que  uno  guste. 


28 

1,349.  Chile*  rellenos. — Se  asan,  se  despellejan  sin  rom- 
perlos, se  echan  en  vinagre  bueno  con  rebanadas  de  cebo- 
lla, *al  pimienta  y  clavo  -molido,  ajos  machacados,  hejotes  y 
calabacitas  cocidas.  A  otro  dia  se  sacan  del  vinagre,  se  es- 
curren y  desvenan  por  un  lado,  se  rellenan  de  pedazos  de 
.chorizo,  jamón  cocido  y  sardinas  en  partes  iguales;  se  re- 
vuelcan en  pan  y  queso  rallados,  se  ponen  en  un  platón  y 
sobre  ellos  una  capa  del  mismo  relleno  y  otra  de  ralladura 
de  pan  y  queso,  se  les  echa  aceite  y  vinagre  y  se  adornan 
con  betabel,  aguacate  y  rebanadas  de  cebolla. 

1,360.  CkiUs  relleno*  depicadiüo.Se  desvenan  los  chiles 
en  crudo,  después  se  asan  y  se  envuelven  en  un  cotense  á 
que  suden,  ser  pelan,  y  se  echan  en  agua  fría.  Se  toma  par- 
te de  lomo  de  puerco  de  enmedio  y  parte  de  lomo  de  cabe- 
za, y  si  se  quiere  ternera  maciza;  todo  se  pica  con  el  mache- 
te á  que  quede  gordito  lo  picado,  se  pone  á  cocer  con  la  sal 
correspondiente;  ya  que  está  cocido  se  pican  jitomates  co- 
lorados; para  medio  de  carne  se  emplean  dos  jitomates,  ya 
se  tendrá  cocido  el  jamón  juntamente  con  la  carne  del  pi- 
cadillo, se  hace  pedacitos  chicos  así  como  de  huevo  duro,  pe- 
dacitos  de  acitrón,  pasas  deshuesadas  y  almendras  monda- 
das, se  pica  por  segunda  vez  la  carne  pero  cuidando  que  no 
se  vuelva  tan  picada  como  aserrín;  se  pone  á  quemar  man- 
teca, se  echa  el  ajo  primero,  después  el  jitomate,  y  luego  la 
carne,  un  poco  de  azafrán,  cuatro  6  cinco  clavos  de  especia, 
canela  y  unos  pocos  de  cominos:  molido  todo  muy  bien  se 
le  echa  á  la  carne  con  el  jitomate,  un  poco  de  azúcar,  vina- 
gre de  Castilla  y  un  poquito  de  caldo  del  picadillo;  esto  se 
deja  hervir  y  cuando  está  cocido  secándose,  se  le  echa  el  ja- 
món, Ua  almendras,  el  acitrón,  las  pasas  y  aceitunas  y  se 


29 

advierte  que  sobresalga  el  gusto  de  la  azúcar  y  el  vinagre; 
se  deja  secar  el  picadillo  que  tome  un  color  dorado,  después 
de  frío,  se  rellenan  los  chiles  y  se  revuelcan  en  harina,  se 
baten  huevos  y  se  fríen  los  chiles.  La  especia  se  hará  del 
modo  siguiente:  Se  toman  jitomates,  se  muelen  juntamen- 
te con  una  rajita  de  canela,  unos -poquitos  de  cominos,  lo 
que  se  coja  con  tres  dedos  de  azafrán,  se  pican  dos  6  tres 
dientes  de  ajo  y  una  cebolla  también  picada  menudita,  se 
pone  una  cazuela  en  la  lumbre,  se  echa  á  quemar  la  canti- 
dad de  manteca  que  se  conozca  suficiente,  á  que  se  fría  aHí 
mucho  el  jitomate;  pero  se  echa  primero  el  ajo  á  que  se  do- 
re, después  la  cebolla  y  luego  el  jitomate;  se  le  echa  agua 
suficiente  para  que  hierva,  después  se  muele  canela,  poqui- 
to azafrán  y  cominos,  un  clavo  de  comer,  hojitas  de  perejil 
y  rebanaditas  de  plátano  y  manzana;  se  deja  hervir  el  caldo 
hasta  que  no  está  agrio,  se  echan  los  chiles  al  caldillo;  se  le 
añade  una  puntita  de  dulce  y  otra  de  vinagre. 

1351.  Chile*  rellenos. — Se  asan  los  chiles  y  se  les  quita 
todo  el  pellejo;  se  desvenan  bien  y  se  les  dá  un  hervor  con 
sal;  se  sacan  de  aquella  agua,  se  echan  en  vinagre  y  sal  y  se 
dejan  de  un  dia  para  otro.  Se  pica  carne  de  puerco  cocida, 
se  ponen  á  f reir  unos  ajos  picados  y  cuando  están  ámedio  freir 
se  les  incorpora  la  carne,  clavo,  pimienta  y  canela  molida, 
sal,  orágano  y  un  poco  de  azúcar;  se  revuelve  todo  y  se  de- 
ja enfriar.  Mientras  se  sacan  los  chiles  del  vinagre,  se  lavan 
y  se  van  rellenando,  cubriéndolos  por  encima  con  un  poco 
de  harina,  después  se  revuelcan  en  huevo  batido  y  sé  fríen. 

El  caldo  se  hace  con  jitomates,  cebollas  y  ajos,  todo  bien 
frito:  se  sazona  con  clavo,  pimienta  y  vinagre:  se  le  añade 
agua  y  la  sal  suficiente,  y  cuando  ya  el  caldo  hierve  se  le 

LA  OMUNIEIU  POBLANA.  —  TOM.  II. — 3. 


30 

agrega  un  poco  de  perejil  picado  y  se  le  echan  loe  chile»  á 
que  dea  un  hervor. 

1,352.  Otros  chiles  rellenos  de  chícharos  y  acelgas.— 8e  des- 
fleman loe  chiles;  se  cuecen  los  chícharo*  y  acelgas;  se  re- 
vuelven 6  mezclan  con  jitomate,  cebolla  y  ajos  picados, 
echándole  la  sal  necesaria;  después  se  fríe  todo  esto  en  dos 
terceras  partea  de  aceite  y  una  de  manteca;  luego  se  relle- 
nan las  chiles;  ya  que  están  rellenos  se  ponen  en  una  cazue- 
la y  encima  se  les  echa  queso  y  aceite  de  comer;  se  tapan 
con  un  comal  con  lumbre  encima  para  que  se  tueste  un  po- 
co el  queso. 

1,363.  Chiles  de  vigilia. — Se  cuecen  acelgas  y  chícharos  á 
parte,  cada  cosa  con  sal; ya  vacíos  se  sacan  del  agua  y  se  es- 
curren, se  fríen  jitomates  en  una  sartén  con  mitad  de  acei- 
te y  mitad  de  manteca;  las  acelgas  picadas.  Se  tuestan,  pe- 
lan y  desvenan  chiles  del  tiempo,  y  se  rellenan  con  la  fritu- 
ra de  las  acelgas.  En  una  tortera  se  pone  una  capa  de  acel- 
gas y  chícharos,  y  otra  de  rebanadas  de  queso  fresoo,  y  así 
fucesiramente  hasta  que  la  última  capa  es  de  acelgas;  se  le 
echa  aceite  y  se  pone  á  dos  fuegos  mansos  hasta  que  sazonan. 

1.354.  Rajas  de  Chuchóte». — Se  tuestan  chilchotes,  se  pe- 
lan y  se  parten  en  rajas.  Se  pone  una  sartén  en  la  lumbre 
con  manteca  y  aceite.  Se  hacen  freír  las  rajas  con  sal,  y 
cuando  están  ya  casi  de  punto  se  les  echa  unas  rebanadas  de 
queso  dejVaca  fresco. 

Si  se  quieren  hacer  con  lecne  debe  tenerse  presente  que 
no  se  fríen  las  rajas  con  aceite,  sino  con  manteca  sola.  La 
leche  se  les  echa  cuando  están  á  medio  cocer. 

1.355.  .  Chile  verde. — Se  asan  jitomates  y  se  despellejan, 
después  se  muelen  y  fríen  en  mantequillaeon  unas  rajas  de 


31 

ohilchotes;  ya  que  está  muy  refrito  se  le  echa  en  vez  de 
agua  atole  blanco,  se  deja  sazonar  y  se  le  agrega  queso  re- 
banado. 

1,366*.  Chile  poblano, — Se  muelen  como  en  el  anterior 
chiles  poblanos  y  se  fríen  con  jitomates  asados  y  despelle- 
jados, pero  sin  rajas;  cuando  están  bien  refritos  se  les  echa 
en  vez  de  agua  leche,  se  sazona  y  se  les  agregan  rebanadas 
de  queso. 

1.357.  Ttattaoyo*  con  flor  de  calabaza. — Se  poneael<nitzta. 
mal  como  es  corriente  y  se  hace  masa  como"' para  tortillas; 
se  cojen  las  flores,  se  les  quitan  los  troncos,  se  rajan  y  lavan, 
sé  ponen  á  cocer  en  una  olla,  se  tuestan  unos  chilchotes,  se 
les  quita  el  pellejo  y  las  venas,  se  rajan  y  se  echa  manteca 
en  una  cazuela,  en  ella  se  fríen  las  flores  y  chile  y  epazote 
deshojado,  se  le  echa  una  poquita  de  agua  y  sal  y  se  deja 
hervir  hasta  qus  seque,,  luego  se  hacen  las  tortillas,  se  re- 
llenan con  esto,  se  doblan  por  la  mitad  y  se  cuecen  al  comal. 

1.358.  Chüpodes  en  vinagre. — Se  echan  en  agua*  hirvien- 
do tal  como  están,  y  al  otro  día  cuando  están  ya  esponja- 
dos, se  les  quita  con  cuidado  el  rabo  para  que  no  se  rom- 
pan; se  les  hace  dar  un  hervor  con  sal,  y  una  cabeza  de  ajo, 
se  les  quita  de  nuevo  el  agua  y  se  echan  en  un  bote  en,  se* 
co,  se  pone  aceite,  vinagre,  sal  y  pimienta,  orégano,  tomi- 
llo, laurel,  unas  rebanadas  de  limón  y  pimienta  entera.  El 
aceite  y  vinagre  ha  de  cubrir  enteramente  los  chiles.  Se  ta- 
pan en  este  estado  y  á  los  ocho  dias  pueden  comerse. 

1.359.  Otro*  ehüpocUs  en  vinagre. — Se'toman  chilpocles 
de  los  mas  grandes  y.  por  su  misad'se  pican  con  un  cuchillo, 
haciendo  que. pase  de  la  otra  parte.  Se  toma  una'olla  y  se 
le  echa  mucho  vinagre  corriente  y  un  poco  del  de  Castilla, 


32 

sal  inficiente  y  un  pedazo  de  panela  blanca;  se  toma  tina 
cabeza  de  ajo  y  erado  se  muele  con  cascara  y  un<«  pocos  de 
cominos,  canela,  clavo,  pimienta  y  todo  esto  molido  se  echa 
en  el  vinagre,  también  orégano  del  fino  y  corriente,  tomi- 
llo, laurel,  un  poquito  de  romero,  dos  6  tres  hojitas  de  yer- 
ba Santa  María,  dos  ó  tres  cabezas  de  ajo  machacadas  y 
otras  tantas  enteras;  todo  esto  se. echa  en  la  olla  á  que  cue- 
zan los  ajos;  cuando  están  medio  cocidos,  se  echan  los  chil- 
pocles  y  sigue  hirviendo  hasta  que  estos  también  se  cuecen: 
ya  que  lo  están,  se  pone  una  sartén  ó  cazuela  en  la  lumbre, 
se  le  echa  aceite  y  en  él  se  fríen  los  chilpocles,  pero  antes 
de  hacerlo  se  fríe  un  puno  grande  de  ajos  picados;  cuando 
están  bien  dorados  se  sacan  y  el  aceite  se  echa  en  la  olla  y 
se  aparta  de  la  lumbre,  y  con  un  plato  y  servilleta  se  tapa  la 
boca  para  que  no  se  evaporen,  se  dejan  reposar  por  tres  6 
cuatro  diaa  y  se  hace  uso  de  ellos. 

1.360.  Modo  de  hacer  los  chiles  en  vinagre. — Se  toman  loe 
chiles  que  estén  mas  verdes,  sin  manchas  ni  picaduras.  En 
un  barril  se  pone  una  capa  de  laurel,  otra  de  chiles  y  otra 
de  rebanadas  de  limón  y  sal;  esta  operación  se  repite  hasta 
llenar  el  barril,  después  se  echa  agua  hasta  el  borde,  se  ta- 
pa perfectamente  y  se  deja  por  quince  6  veinte  días:  pasa- 
do este  tiempo,  se  destapa,  se  sacan  los  chiles  uno  tí  uno, 
se  abren  con  una  navaja  y  se  lea  sacan  las  venas,  se  prepa- 
ra una  fritura  de  aceite  de  comer,  rebanadas  de  cebolla, 
ajos  machacados  y  laurel,  se  ponen  los  chiles  en  un  bote 
con  vinagre  de  Castilla,  la  fritura  y  un  poco  de  orégano  de 
China;  pasado  un  poco  de  tiempo  se  hace  uso  de  ellos. 

1 .361.  Guisado  de  chiles  en  vinagre.  — Se  descuartizan  unos 
pollos,  se  cuecen  con  lomo  de  puerco,  jamón,  chorizos;  se 


33 

desvenan  unos  chiles  en  vinagre  y  se  lavan  para  que'  no  pi- 
quen. Se  pone  una  cazuela  con  manteca,  se  fríe  cebolla  en 
gajos,  allí  se  echa  el  chile  molido;  ya  que  se  medio  frió  se 
echa  el  caldo  de  la  carne,  la  carne  de  puerco  y  de  pollo,  y 
un  pedazo  de  pau  frito  y  molido,  especias,  clavo,  canela, 
perejil  suelto,  aceitunas,  chiles  en  vinagre,  alcaparras,  al- 
mendras y  se  dejan  á  fuego  manso. 

1.362.  Tamales.— Se  ponen  siete  tazas  de  maíz  á  hacer  el 
nitztamal;  al  dia  siguiente  se  lava  y  se  pone  á  secar  al  sol,  ya 
que  está  seco  se  muele,  se  cierne  por  un  ayate  y  en  una  ca- 
zuela se  pone  libra  y  cuatro  onzas  de  manteca,  seis  yemas 
de  huevo  y  se  bate  todo  junto  con  una  cuchara;  ya  que  es- 
tá bien  batido  se  le  incorpora  el  maíz,  se  le  pone  una  taza 
de  agua  de  tequesquite  fuerte  y  bien  asentado,  y  si  la  masa 
queda  espesa  se  le  echa  agua  pura  y  sal  al  gusto;  se  deja  re- 
posar dos  horas  6  mas  y  se  bate  mucho. 

Para  el  relleno  se  hace  mole  con  carne  de  puerco  que 
quede  espeso,  y  se  junta  con  la  masa.  Si  se  quiere  que 
queden  colmados  se  les  va  echando  mole  y  pedacitos  de 
carne  Á  medida  que  se  van  haciendo.  - 

En  utia  olla  se  hace  un  tapexcle  con  palos  y  hojas,  y  se 
le  pone  agua  pero  que  no  reboce  de  los  palos,  y  se  van  co- 
locando los  tamales;  se  pone  á  un  fuego  regular;  encima  se 
le  ponen  hojas  y  un  trapo  para  que  la  olla  quede  bien  ta- 
pada. 

Con  la  misma  masa  se  pueden  hacer  de  dulce  rellenándo- 
los de  loche.  La  misma  operación  se  hace  con  el  arroz. 

1.363.  Tamales  dé  cfctf'.— Se  hace  la  masa  como  para  los 
tamalea  comunes,  con  la  diferencia  del  relleno  que  es  el  si- 
guiente :  sé  fríe  una  poca  de  carne  de  puerco  que  le  nom- 


34 

bran  falda;  se  corta  en  pedazos  chicos  (con  una  poca  de  agua 
y  sal)  se  coje  Un  poco  de  chile  mulato  y  paailla,  se  tuesta  y 
desvena,  se  muele  con  unos  tomates  cocidos,  un  poquito  de 
ajonjolí  tostado,  clavo,  canela,  pimienta  y  tres  dientes  de 
ajo  asados;  todo  esto  molido  se  echa  en  la  carne  que  está 
friendo  hasta  que  quede  mas  espeso  que  el  mole  corriente, 
se  hacen  los  tamales  y  con  una  cuchara  se  rellenan  ponién- 
doles á  cada  uno  un  pedaoito  de  carne;  se  envuelven,  etc. 

1.364.  Tamales  de  cuajada.— A  un  cuartillo  de  maíz  ca- 
cahuazentle  veinticuatro  yemas  de  huevo  batidas  en  mante- 
quilla, dos  quesos,  azúcar  al  gusto  y  un  poco  de  leche  para 
dar  punto  á  la  masa.  Se  echa  primero  la  mantequilla,  luego 
los  huevos,  después  el  queso  molido;  la  leche  con  azúcar  se 
vá  echando  poco  á  poco  y  se  bate  bastante  la  mee»  para  °¿ue 
dé*  punto.    Se  envuelven  los  tamales  y  se  cuecen  como  los 

de  arroz. 

1.365.  TamaU»  efe  At*ew.—  Se  toman  tre*  libras  de  maíz 

cacahuazentle,  media  libra  de  manteca  derretida,  ocho  ye- 
mas de  huevo,  dulce  al  gusto  y  un  poco  de  agua  caben  te; 
no  debe  quedar  ni  aguado  ni  espeso.  Se  bate  todo  sin  que 
haga  espuma;  se  le  echa,  bastante  canela,  pesas,  piñones, 
almendras,  nueces  y  ajonjolí;  luego  se  pon®  *"  cocer  en  no" 
jas  como  los  anteriores.  Se  tapa  la  olla  con  zacate  mien- 
tras cuecen.  Los  de  arroz  se  hacen  del  mismo  modo. 

1.366.  TamaU*  de  elote.— Se  descabezan  los  elotes  qui- 
tándoles las  hojas  con  cuidado;  se  quita  el  grano,  se  muele 
con  un  poco  de  leche  y  se  cuela.  Se  miden  las  tazas  de  elo- 
te y  se  le  agregan  otras  tantas  de  leche;  se  pone  a  cocer  es- 
te atole  con  unas  rajas  de  canela  y  cuando  ha  hervido  un 

.  poco  se  le  echa  azúcar  al  gusto,  dejándolo  en  la  lumbre  has- 


35 

ta  que  se  ye..el  fondo  del  cazo.  Coa  este  atole  se  vau  cu- 
briendo las  hojas  del  elote  que  se  han  hecho  hervir  de  an- 
temano en  agua  de  anís  y  se  van  poniendo  en  una  cazuela 
con  cuidado  para  que  no  se  vacíen.  Terminado  esto,  se  po- 
ne la  cazuela  en  la  boca  de  una  olla  que  tenga  agua  hirvien- 
do para  que  cuajen  y  se  sirven  calientes. 

1.367.  Otros*  tamalea  de  dote. — Se  escojen  éstos  los  mas 
tiernos,  se  descabezan  con  un  cuchillo  y  se  van  separando 
las  mejores  hojas;  se  cortan  los  granos  y  se  remuelen  bien, 
bajándolos  del  metate  con  un  poco.de  leche,  agregándoles 
azúcar  y  sal  al  gusto. 

Para  25  ó  30  elotes  se  ponen  doce  onzas  de  manteca;  ésta 
se  pone  á  calentar  y  muy  caliente  se  echa  sobre  el  elote  pre- 
parado y  se  bate  hasta  que  incorpore  bien.  Se  unen  dos  ho- 
jas por  la  cabeza,  y  sobre  ellas  se'  echa  la  cantidad  nece- 
saria para  formar  el  tamal,  se  envuelven  y  se  prepara  la  olla 
con  unos  elotes  en  el  fondo  y  un  poco  de  agua  con  sal.  Se 
pone  á  la  lumbre  y  así  que  hierve  se  colocan  los  tamales  y 
se  tapan  con  el  resto  de  las  hojas  y  una  tapadera  que  ajus- 
te bien;  se  deja  hervir  por  una  ó*  dos  horas  teniendo  cuida- 
do que  no  les  falte  agua  en  el  fondo. 

1 .368.  Tamole*  de  maíz  cacahuazentle  y  huevo,  — Se  mezcla 
para  hacerse  la  masa  treslibras  de  dicho  maíz,  cocido  y  mo- 
lido y  cernido  como  se  indica  en  los  artículos  anteriores, 
media  libra  de  manteca  derretida,  ocho  yemas  de  huevo,  el 
azúcar  necesaria,  según  se  quieran  mas  6  menos  dulces,  y 
una  poca  de  agua  tibia;  no  debe  quedar  esta  masa  ni  aguada 
ni  espesa,  y  se  bate  hasta  que  haga  espuma;  se  ponen  aden- 
tro los  tamales,  bastante  canela,  pasas  y  almendras,  piño- 


36 

nei,  pedacitos  de  nuez  y  ajonjolí,  m  forman  y  cuecen  lo 
mismo  que  loe  demás. 

1 ,369.  Ta  malee  cominos  ó  cernido  de  maíz  común.  —  8e  pre- 
para el  maíz  en  ni  tata  mal,  se  desolleja,  ae  lava  y  se  muele 
enteramente  como  si  fuera  para  hacer  atole.  Bien  remolida 
la  masa  se  pasa  por  un  ayate,  y  después  de  cernirse  se  mes- 
clan  nueve  onza*  de  azúcar  blanca  y  una  libra  de  manteca 
con  la  sal  fina  correspondiente  y  un  poquito  de  anís  hume- 
deciéndose la  masa  con  agua  tibia:  se  be  te  después  bien,  y 
en  hojas  de  maíz  lavadas,  remojadas,  escurridas  y  enjuga- 
das, se  van  echando  las  cantidades  que  puedan  contener  de 
la  masa,  envolviéndose  y  cubriéndose  con  ellas  y  doblándose 
por  la  mitad,  se  van  formando  los  tamales.  Después  se  pon- 
drá una  olla  de  suficiente  capacidad  á  la  lumbre,  echándole 
muy  poca  agua,  pudiéndole  poner  dentro  de  esta  agua  un 
poco  de  zacate  para  que  mate  el  hervor,  mas  erriba  se  forma 
un  tapextle  6  enrejadito  de  tejamanil,  y  se  acomodarán  en- 
cima los  tamales  de  modo  que  no  les  llegue  el  agua  y  solóse 
cuezan  al  vapor,  tapándose  la  boca  de  la  olla  con  una  cazue- 
la de  su  tamaño  y  un  lienzo  que  se  ata  muy  bien;  cuando 
la  masa  se  despega  de  la  hoja  es  señal  que  están  cocidos,  y 
entonces  quedan  hechos  los  tamales,  que  se  apartan  de  la 
lumbre  y  se  sirven  calientes,  solos  ó  con  atole  de  leche. 

1,360.  Tamalee  de  dulce. — Se  lava  bien  el  nitztamal  y  se 
enjuga  con  un  paño;  se  muele  y  se  cierne  bien,  luego  se  le 
echan  nueve  onzas  y  media  de  azúcar,  una  libra  de  mante- 
ca, sal,  agua  tibia  y  anís;  todo  esto  se  bate  bien.  Se  pone  en 
una  olla  un  poco  de  agua,  sobre  esto  se  forma  un  tapextle 
de  leña  seca  dispuesto  de  modo  que  no  se  mojen  los  ta- 
males que  se  colocan  en  él  para  que  se  cuezan  con  el  vapor 


37 

de  U  agua.  Esta  operación  se  hace  con  los  tamalee  de  dulce 
lo  mismo  que  con  loé  de  chile  y  especias,  con  la  diferencia 
de  qoe  estos  últimos  no  llevan  azúcar. 

1.371,  Otras  tamale*. — A  tres  libras  de  maís  eacahuasen- 
tle  se  le  ponen  mas  de  tres  de  manteca;  el  maís  se  pone  co- 
mo para  atole  bien  layado  y  se  enjugan  con  nn  liento  para 
ponerlo  á  secar  al  sol;  luego  se  muele  y  se  cierne  en  un  aya- 
te, se  le  echa  un  poco  de  agua  quebrantada,  batiéndola  has- 
ta que  haga  como  ampollas,  y  azúcar  molida:  se  hace  espe- 
sarla masa  porque  la  azúcar  le  hace  aguarse;  para  saber  si 
está  bueña  se  hace  una  bolita  de  la  masa  y  se  echa  en  agua 
y  si  se  sube  es  porque  está  buena.  £1  relleno  se  hace  de  ye- 
mas de  huevo  cocidos,  azúcar  molida,  piñones t  acitrón,  ca- 
nela y  ajonjolí;  se  ponen  las  hojas  á  escurrir  desde  la  inafiana 
para  que  no  estén  mojadas;  se  ponen  los  tamales  á  oocer  en 
una  olla  como  los  anteriores  y  cuando  suenan  á  aventados  se 
les  despegan  las  hojas  en  que  están  cocidos.  Esta  masa  sin 
azúcar  y  sin  sal  puede  rellenarse  da  chile,  especias,  etc. 

1.372.  Tamales  de  flor  de  calabaza, — Para  medio  almud 
de  maíz,  se  hace  nisoemil  y  nitztamal  como  para  atole;  se  la- 
va mucho,  se  pone  á  secar  al  sol,  que  quede  lento,  y  se  mue- 
le; se  cierne  por  un  ayate,  se  coje  según  la  cantidad  de  maíz 
el  tanto  de  manteca;  se  echa  esta  en  una  cazuela  y  junto  con 
ella  dos  6  tres  yemas  de  huevo,  se  bate  muy  bien,  se  echa 
el  maíz  cernido,  se  pone  á  hervir  un  poquito  de  anís  con 
sal  y  se  echa  á  la  masa  cuando  está  tibia;  se  revuelve  mucho 
y  si  está  espesa  se  le  echa  una  poca  de  agua  fría  y  se  está 
batiendo  mucho;  si  le  mita  sal  se  le  'echa,  y  para  que  se  se- 
pa que  está  bien  batida,  se  echa  una  poquita  en  agua  y  si 
se  queda  arriba  ya  está;  se  le  echan  bastantes  flores  de  ca- 


38 

labaza,  bástente  epazote  deshojado,  chiles  verdes  del  tiem- 
po desvenados  y  rajados,  se  revuelve  todo  y  se  van  hacien- 
do los  tamales,  del  tamaño  que  se  quiera.  Se  coje  una  olla 
y  se  le  poden  unostpalitos,  como  pepeztitlo  y  encima  unas 
hojas  de  los  mismos  tamales,  se  le  echa  agua  hasta  que  lie* 
gue  á  los  palos  y  se  pone  á  la  lumbre;  ya  que  está  hirvien- 
do se  ponen  loé,  tamales,  se  tapa  la  boca  con  una  servilleta 
y  un  plato  y  se  amarra:  para  saber  si  ya  están  cocidos  se 
desenvuelve  uno  y  si  no  se  pega  en  la  hoja  ya  están  buenos. 
1,973.  Tamal  de  «astuta  ai  utilo  d*  Veracru*.  —A  un  real 
de  masa  como  para  tortillas,  se  le  pone  el  caldo  donde  se 
habrán  cocido  dos  reales  de  carne  de  puerco  mexolada  ore- 
jas y  costillas;  se  sazona  con  la  sal  suficiente  y  se  le  ponen 
seis  onzas  de  manteca;  se  pone  á  cocer  cuidando  de  menear- 
la para  que  no  se  pegue,  se  prueba  la  masa  y  cuando  está 
cocida  se  aparta,  el  punto  ha  de  ser  poco  mas  que  el  ponche; 
á  esta  masa  se  le  pone  una  hoja  santa  ó  epazote,  luego,  se 
toman  tres  clases  de  chiles,  tlaco  de  cada  uno,  ancho,  pasi- 
11a  y  mulato,  muy  bien  desvenados  y  tostados  se  muelen; 
se  fríen  en  manteca  ocho  6 .  diez  jitomates,  y  molidos,  se 
unen  con  el  chile,  y  bien  fritos,  se  echa  la  carne  y  un  poco 
de  su  caldo,  unos  pedazos  de  hoja,  santa  ó  epazote  y  en  una 
cazuela  grande  se  pondrá  untada  con  mucha  manteca  una 
capa  de  masa,  otra  de  carne  y  mole  hasta  concluir,  procu- 
rando que  la  última  capa  sea  de  masa,  y  dejando  un  poco 
del  mole  sin  carne  para  ponerlo  encima.  Se  coloca  muy 
bien  en  una  hornilla  que  esté*  bien  caliente  y  encima  un  co- 
mal con  lumbre;  se  Cieñe  cuidado  de  introducir  un  popote 
y  cuando  no  sale  manchado  está  de  punto.  Se  aparta  y  de- 
ja reposar  toda  la  noche,  por  la  mañana  se  calienta  en  la 


39 

misma  forma,  y  ai'se  hace  en  el  dia,  que  sea  muy  tempra- 
no para  que  pueda  reposar.  Guando  se  hace  de  pescado, 
se  deshaoerá  el  róbalo,  ee  enjugará  con  una  servilleta  y  en 
hojas  de  elote  seco  6  en  papeles  untados  de  manteca  se  en- 
vuelven  las  tajadas  y  se  ponen  á  la  parrilla,  estando  ya  tier- 
nas se  echan  en  el  chile  y  se  hace  el  tamal  lo  mismo  que  el 
anterior,  omitiendo  la  hoja  santa  ó*  epazote. 

1.374.  Tamales  de  dulce. — Se  pone  el  nitztamal  y  se  lava, 
se  muele  en  seco  y  se  cierne  en  un  ayate,  se  muele  la  azú- 
car en  polvo,  se  echa  la  masa  en  una  cazuela,  con  la  azocar 
y  manteca  fría;  se  baten,  se  hacen  y  se  rellenan  de  manjar 
blanco.  Se  cbje  la  leche  y  se  pone  con  azúcar  y  arroz  mo- 
lido y  colado  hasta  que  espese. 

1.375.  Tamalea  de  chilote. — Se  pone  en  la  lumbre  una  ca- 
zuela con  la  azúcar  y  se  deja  calentar:  se  pica  jitomate  y 
perejil,  se  le  echa  sal  y  se  frie;  ya  que  está  frito  se  le  echa 
caldo  de  carne  de  puerco  y  se  muele  clavo  y  canela:. se  le 
echa  un  pedazo  de  azúcar  y  vinagre  de  Castilla,  alcaparras, 
pasas,  almendras,  aceitunas,  chiles  en  vinagre  y  rebanadas 
de  queso  cocido. 

1.376.  Tamales  blancos. — Se  cierne  el  maiz  y  se  echa  en 
una  batea;  se  le  añade  agua  de  anís  hervida,  y  agua  de  te- 
quesquite  asentada  y  todo  f  *io;  se  baten  mucho  con  las  dos 
manos,  y  se  le  echa  manteca  batida  fría  y  agua,  limpia. 

1,377. '  Tamales  cernidos. — Después  de  pelado  el  maíz  se 
refriega  bien  hasta  quitarle  el  ollejo;  se  pone  al  sol  para 
que  seque,  se  muele  en  un  metate  y  se  pasa  por  un  ayate 
fino;  á  cada  libia  de  este  polvo  se  le  echa  media  libra  de 
manteca  derretida  y  un  poco  de  caldo  para  que  acabe  de 
soltar.    Esto  se  hace  en  un  cazo  para  que  pueda  batirse 


40 

hasta  que  suene  oomo  turrón.  Antes  se  prepara  el  Dicadi- 
llo como  para  ohfles  rellenos,  y  se  ran  envolviendo.  \ 
*  1,378.  Tamales  de  queso.  — 8e  muelen  siete  tasas  de  nitztá- 
mal,  se  lava  muy  bien  y  se  muele  sin  asolearle,  después  se 
cierne  y  amasa  con  libra  y  media  de  manteca  y  doce  yemas 
de  huevo  oon  poca  sal.  Incorporado  todo  esto  se  le  echa 
un  poco  de  agua  fría  procurando  que  no  quede  muy  aguado. 
Se  tiene  ya  preparada  libra  y  media  de  acucar  clarificada 
y  de  punto  de  espejo,  que  se  agrega  á  la  masa:  se  bate  un 
poco  con  la  mano. para  que  se  ponga  de  un  espeso  regular, 
se  pasan  por  un  metate  dos  quesos  de  Ohiantla  y  se  revuel- 
ven bien  con  la  masa  y  se  deja  reposar  para  hacer  los  ta- 
males. 

Se  advierte  que  no  se  debe  batir  la  masa  con  cuchara,  si- 
no con  la  mano,  y  también  que  no  se  bate  mucho  porque  se 
les  sale  la  manteca,  que  se  les  echa  fría.  8i  el  queso  está  sa- 
lado no  se  les  echa  sal;  pero  si  está  de  buen  sazón  se  les  po- 
ne un  poco.  Para  ponerlos  á  cocer  se  ponen  con  la  cabeza 
para  arriba  y  lo  doblado  para  -abajo. 

1.379.  Tamales  de  chile. — Se  hace  el  nitztamal  en  seco,  se 
cierne,  se  le  echa  el  caldo  de  la  carne  de  puerco  y  un  poco 
de  agua  de  téquesquite  y  sal  molida.  Se  bate  mucho,  y .  se 
le  pone  manteca  encima  fría;  se  hacen  con  agua  limpia.  A 
dos  almudes  de  maíz  se  le  ponen  tres  libras  de  manteca. 

1.380.  Tómale»  de  hongos.  — Se  hace  la  masa  lo  mismo  que 
para  los  de  chile,  y  se  rellenan  con  lo  siguiente:  se  onecen 
los  hongos  en  una  olla,  se  echa  manteca  en  una  cazuela  y 
allí  se  ponen  los  hongos  escurridos,  se  rajan  unos  chiles  del 
tiempo,  se  desvenan  y  se  echan  donde  están  los  hongos  jun- 
to con  un  poco  de  epazote  deshojado  y  sal  Guando  está  se- 


41 

c<>  con  esto  se  rellenan:  también  se  puede  hacer  el  relleno, 
cocidos  los  hongos  como  los  anteriores,  se  tuestan  ocho  6 
diez  chiles  mulatos,  se  desvenan  y  muelen,  se  fríen  en  man- 
teca, se  echa  en  poco  de  epazote  deshojado  y  su  sal  corres- 
pondiente, debe  quedar  como  el  mole  de  los  otros  tamales 
de  chile,  y  se  echan  los  hongos  cocidos  y  se  hace  lo  misino 
que  en  los-  demás. 

1;381.  Tamales  de  arroz. — Se  lava  el  arroz  muy  bien,  se 
tiende  en  una  servilleta  y  se  pone  al  sol;  así  que  está  bien 
seco  se  muele  muy  remolido  y  se  pasa  por  un  tamiz,  ya  bien 
tamizado  se  pone  en  un  trasto  donde  se  puedan  batir  bien 
y  se  le  vá  echando  mantequilla  derretida  y  bien  clarificada; 
una  vez  que  está  bien  clarificada  se  le  agrega  azúcar  muy  re- 
molida y  se  vuelve  á  batir  hasta  que  tenga  la  pasta  dulce 
muy  pasada,  pues  cociéndolas  se  les  pasa;  así  que  ya  tiene 
dulce  se  echa  una  cantidad  de  leche  igual  á  la  que  se  echa 
de  agua  y  una  6  dos  yemas  de  huevo;  la  leche  debe  estar 
tibia  para  que  la  pasta  no  se  ponga  dura;  se  le  añade  un  po- 
co de  sal  y  se  sigue  batiendo  hasta  que  haga  ojo  la  masa  6 
que  la  cuchara  se  sostenga  sola  en  medio  de  la  pasta.  Se 
suelen  pintar  las  hojas  en  que  se  envuelven  con  betas  colo- 
radas y  amarillas.  Las  primeras  se  hacen  con  panecillo  y  las 
segundas  con  loche  deshecha  y  amarillo  con  yemas  de  hue- 
vo. Se  echan  los  tamales  en  las  hojas  con  una  cuchara  y  se 
rellenan  con  pasas,  almendras  ó  con  manjar  blanco  6  leche 
amarilla  y  se  ponen  á  cocer:  no  se  "desenvuelvan  hasta  que 
están  fríos,  porque  si  no  se  deshacen. 

1,382.  Otro$  tamales  de  arroz, — Se  lava  una  libra  de  arroz 
bien  remojado;  se  muele  no  muy  remolido,  se  le  echa  nata 
de  leche  y  se  pone  en  una  caznela  á  que  se  esponje;  después 


43 

te  le  añaden  tres  yemas  dé  huevo  crudas,  diez  onzas  de  man* 
toquilla  derretida  7  azúcar  al  guato.  8e  hacen-  loa  tamalea 
como  hit  otro».  Se  echa  un  poco  de  masa  en  el  agua  hasta 
que  te  sube,  se  rellenan  de  cajeta  7  se  hacen  flojitos  porque 
en  la  olla  se  esponjan ;  se  dejan  en  el-  vaho  -de  la  olla  hasta 
que  están  7  se  echan  calientes. 

1.383.  Adobo. — Se  desvena  y  remoja  chile  mulato,  se 
muele  con  un  poco  de  jitomate,  se  frie  7  se  le  echa  un  poco 
de  agua  7  sal,  la  carne,  dientes  de  ajo  7  cominos  molidos,  7 
se  deja  sazonar  hasta  que  quede  casi  seco;  luego  se  adorna 
con  plátano,  pan  frito  7  oebolla  rebanada. 

1.384.  Adobo  blanco. — Se  hace  lo  mismo  que  el  anterior, 
pero  no  lleva  chile  sino  puro'  jitomate. 

1.385.  Adobo  de  chilpoeU. — 8e  hace  lo  mismo  que  el  pri- 
mero, solo  que  en  vez  de  usar  chile  mulato  se  usa  chilpocle 
hervido:  si  se  quiere  que  no  pique  es  preciso  desvenarlo  7 
-hervirlo  desde  la  víspera  dejándolo  remojar  toda  la  noche. 

1.386.  Adobo  de  Alverjones. — Se  limpian  loa  alverjones, 
se  ponen  á  cocer  en  agua  caliente  con  un  poco  de  tequezqui- 
te; no  se  les  echa  agua  fría;  va  que  están  cocidos  se  les  echa 
agua  tibia  7  se  escurren  por  tres  veces  hasta  que  les  quede 
el  agua  limpia.  8e  lea  pone  otra  agua  palíente,  con  un  poco 
de  manteca  7  sal;  se- sazona  hasta  que  queden  espesos;  se 
remoja  chile  ancho,  se  muele  con  ajos  7  cominos,  se  fríen  re- 
tazos de  puerco  7  costillas,  fuego  se  refrié  el  chile  muy  bien, 
se  echan  los  alverjones  á  que  sazonen  7  queden  espesos:  así 
se  hacen  blancos  con  no  ponerles  chile. 

1.387.  Adobo  $eco. — Se  toma  chile  ancho,  se  desvena  7  se 
pone  en  agua  para  que  le  quite  un  poco  lo  picante;  se  mue- 
le después  con  ajos  7  cominos  7  se  le  echa  vinagre  para  apear- 


4S 

lo  del  metate.  Luego  que  está  bien  molido  se  le  echa  agua 
y  sal.  En  una  olla  se  le  echa  carne  de  puerco  y  se  cubre  con 
el  caldo  que  se  ha  dicho  antes.  Esta  operación  será  bueno 
hacerla  en  la  tarde  para  que  la  carne  esté*  en  infusión  toda 
la  noche.  Por  la  mañana  se  pone  á  cocer;  si  tiene  gordura 
se  le  pone  poca  manteca  y  un  >oco  mas  si  no  la  tiene.  Nada" 
debe  agregársele  para  que  espese,  pues  espesa  por  sí  misma; 
debe  graduarse  el  chile  para  que  no  carezca  el  adobo  de  cal- 
do, y  en  caso  de  faltarle,  se  le  puede  agregar  un  poco  mas 
de  vinagre.  Al  servirse  se  adorna  con  un  plátano  frito. 

1.388.  Adobo  de  carné  de  puerco. — Se  muele  chile  ancho 
desvenado  y  tostado  con  una  cabewi  de  ajo  y  jitomate  asa- 
do, clavo,  pimienta  y  canela,  se  fríe  todo  esto  muy  bien 
después  de  molida  y  se  le  echa  la  carne  con  el  caldo  en  que 
se  coció.  Se  deja  en  la  lumbre  hasta  que  sé  pone  seco. 

1.389.  Adobo  de  chícharos. — Se  prepara  todo  como  para 
hacer  el  adobo  anterior,  luego  en  lugar  de  echarle  la  carne 
se  le  echan  los  chícharos,  agregándoles  aceite  y  vinagre. 

1.390.  Adobo  de  horno. — Se  desvena  y  pone  á  remojar 
chile  ancho  y  mulato  en  iguales  cantidades;  después  se  mué- 
le  con  ajo  y  cominos  y  se  untan  muy  bien  con  esto  los  lomos 
de  puerco  crudos:  se  ponen  en  una  tortera  untada  con  bas- 
tante manteca  y  se  mete  al  horno  templado  hasta  que  esté* 
cocido,  y  si  se  quiere  se  sirven  enteros  adornándolos  ó  en 
rebanadas  con  ensalada;  dejándolo  secar  enteramente. 

1,391. .  Adobo  de  coliflor. — Se  parte  en  gajos  la  coliflor  y 
se  pone  á  cocer  oon  sal ;  ya  que  están  cocidos  se  enjugan  bien ; 
se  bato  huevo  y  se  fríen ;  se  remoja  chile  mulato  y  se  muele 
con  cominos,  en  poca  cantidad  y  dos  dientes  de'  ajo;  se  fríe 
y  se  le  echa  tantita  agua  y  sal,  un  poco  de  aceite,  un  poco 


a 

de  orégano  y  ya  que  todo  está  hirviendo  te  le  echa  1*  coli- 
flor y  uo  poco  de  pan  mojado. 

1,892.  Adobo  de  ¿ole* — Se  pican'  las  coles  y  se  ponen  á 
cocer,  ya  que  están  cocidas  se  enjugan;  se  muele  chile  an- 
cho remojado,,  ajo  y  comino,  se  fríe  muy"  bien  el  chile  y  se 
le  echa  el  caldito  de  la  carne,  retacos,  costillas,  chorizos  y 
unos  pocos  de  garbanzos  cocidos  y  limpios.  Se  ponen  i  freír 
las  coles  en  manteca  en  una  cazuela  y  se  echa  después  en  el 
adobo;  han  de  quedar  espesas.  Del  mismo  modo  se  hacen  en 
especia  con  jitomate  y  ajo  picado,  cebolla  picada  y  cominos 
molidos;  se  les  echa  el  caldo  de  la  carne  como  á  loa  otros. 

1,393.  Adobo  de  chilpocU.—Se  pone  á  cocer  el  ohilpocle, 
se  asan  unos  jitomates  y  se  muelen  con  ajos  y  cominos;  se 
refrié  todo  muy  bien :  se  sancocha  cebolla  picada  gorda,  se 
fríe  el  chile  y  se  le  echa  el  caldo  de  la  carne  con  papas  cor* 
tadas  en  cuarterones  y  cocidas  á  parte. 

ly$9i.* A dobülo. — Se  desvena  un  poco  de  chile  ancho  y  se 
echa  á  remojar,  ya  que  esté  bien  desvenado  se  muele  y  se 
bate  con  un  poco  de  vinagre  y  nna  ramita  de  orégano:  se  po- 
nen á  cocer  unos  hejotes,  unos  chícharos,  unas  calabacitas 
muy  chiquitas  y  zanahorias,  todo  picado;  ya  que  está  bien 
cocido  seVevuelve^eorTel  chile. 

1,396.  AdobUlo. — §e  cuecen  calabacitas  con  sal  y  un  poco 
de  vinagre;  á  aparte  se  cuecen  papas  y  hejotes;  se  muele 
chile  ancho'remojado,  un  pedazo J  de  pan,  unos  dientes  de 
ajo  y  comino  con  la  sal  correspondiente.  En  este  adobíllo 
se  echan  las  calabacitas,  papas  y  hejotes  y  se  agrega  aceite, 
queso  añejo  rallado  y  tomillo. 

1,396.  tOtro  adobíllo. — Se  cuecen  calabacitas  chicas,  con 
agua  de  tequezquite,  se  cuecen  también  unas  papas,  chicha- 


46 

ros  y  he] otea,  cada  oom  por  separado,  se  remojan  unos  chi  • 
Irs  mulatos,  se  desvenan  y  muelen  con  seis  dientes  de  ajo  y 
tan  titos  confinos:  se  echa  en  un  traste  el  chile  y  en  el  coci- 
do anterior,  vinagre  bastante  y  aceite,  tomillo,  sal,  una  po  * 
ca  de  cebolla  picada  y  queso  fresco  despolvoreado  con  el 
rallo. 

1.397.  Pollos  mechados  y  adobados. — Limpios  los  pollos  se 
mecharán  con  tiras  de  jamón,  y  puestos  en  una  cazuela  hon- 
da se  les  echará  un  adobo  de  chiles  anchos  tostados,  desve- 
nados, remojados  y  molidos  con  olavos,  pimienta,  canela, 
culantro  tostado,  ajos,  vinagre  y  sal,  y  al  dia  siguiente, 
echándoles  manteca,  mejorana  y  agua,  se  pondián  á  dos 
fuegos,  se  cuidará  de  voltearlos  hasta  que  después  de  bien 
cocidos  queden  como  asados  en  su*  mismo  ado*»o.  y  para  lie- 
varios  á  la  mesa  se  pondrán  sobre  hojas  de  lechuga,  y  se 
les  echará  por  encima  aceite,  aceitunas,  chilitos  y  alcaparro- 
nes. 

1.398.  'Cabrito  adobad». — Se  freirán  en  manteca  con  sal 
raciones  de  cabrito,  y  estando  fritas  se  les  echarán  suficien- 
tes ajos  machacados,  y  ya  que  ésto*  hayan  frito  se  les  agre- 
ga chile  ancho  desvenado  y  molido  con  clavos,  pimienta, 
cominos,  ajengibre,  y  cuando  esté  se  le  echará  la  agua  ne- 
cesaria, vinagre,  unas  hojas  de  laurel  y  un  manojito  de  to- 
millo; así  que  este*  cocido  se  quemará  manteca  en  una  ca- 
zuela, y  quitándole  el  tomillo  y  laurel  á  la  olla  se  vaciará 
en  la  manteca,  y  á  dos  fuegos  se  acabará  de  hacer,  quedará 
seco  y  se  le  pondrán  rebanadas  de  cebolla  y  aceitunas. 

1.399.  Pulpas  dé  venado  machadas  y  en  adobo. — Después 
de  bien  desengrasadas  y  enjuagadas  se  mecharán  con  tiras 
de  jamón  revolcadas  en  sal  y  pimienta  en  polvo,  ajos,  cla- 

L\  eOOTNIRA  POBLANA — TOM  II---4. 


40 

vos  y  raja»  do  canela,  y  puestas  en  una  cazuela  se  adobarán 
con  chile*  anchos  tostados,  desvenados  y  molido»  con  ajos, 
claros»  pimienta,  canela,  cominos,  culantro  tostado,  toda 
molido  é  incorporado  oon  vino,  vinagre,  sal,  orégano  y  li- 
ma rebanada,  y  al  día  siguiente  se  echa  en  una  olla,  se  le 
agrega  el  agua  precisa  y  manteca,  y  se  pondrá  al  fuego,  y 
cuando  están  cocidas  se  quemará  mas  manteca  en  una  ce- 
suela  y  se  concluirá  en  todo  lo.  demás  como  el  anterior. 

1.400.  Pulpa*  der  ternera  mechada*  y  adobada*.. — Mecha- 
das las  pulpas  como  las  anteriores,  y  puestas  en  el  misino 
adobo,  se  cocerán  al  dia  siguiente  en  una  olla  oon  la  p«ca 
agua  que  tengan  y  manteca,  y  así  que  se  haya  consumido 
el  agua  se  freirán  en  su  mismo  odobo,  cuidando  que  no  se 
quemen,  y  cuando  hayan  frito  bien  se  les  echará  un  caldo 
hecho  de  huesos  de  vaca,  jamón,  chorizos,  laurel,  nabos, 
cebollas  enteras  y  sal;  ya  que  estén  cocidas  las  pulpas  se 
quemará  manteca  en  una  cazuela,  se  vaciará  la  olla,  se  le 
agrega  el  jamón  en  tro**,  los  chorizos,  las  cebollas  desho- 
jadas, los  tuétanos  ya  cocidos  en  la  ctra,  un  poco  de  pan 
frito  y  molido,  y  á  dos  fuegos  se  dejará  secar.    • 

1.401.  Otros  tin  mechar. — Lavadas  y  cortadas  las  racio- 
nes de  pulpas,  se  echarán  en  una  olla  con  sal,  agua,  vina- 
gre, rebanadas  de  ohorizon,  trozo*  de  longaniza  y  tiras  de 
jamón,  chiles  anchos  molidos  con  ajos,  clavos  y  cominos; 
se  pondrán  al  fuego,  cuando  ya  esté  cocida  la  carne,  se  aca- 
bará de  hacer  como  los  anteriores  en  manteca  quemada,  y 
estando  seco,  cuando  se  vaya  á  servir  se  adorna  oon  jamón, 
ohorizon,  longaniza  y  rebanadas  de  cebolla. 

1.402.  Lomo  de  cerdo  adobado. — Después  de  lavado  se 
hará  rebanadas  de  tres  á  cuatro  dedos  sin 'que  traspase  al 


•  47 

otro  lado,  y  puesto  en  un*  cazuela  honda  se  adobará  con 
chiles  anchos  desvenados,  remojados  y  molidos  con  sufi- 
cientes ajos,  cominos,  sal,  vinagre,  orégano  y  tomillo  y  al 
dia  siguiente,  <5  en  el  mismo  si  fuese  necesario,  se  le  echa- 
rá el  agua  precisa,  manteca,  y  se  pondrá  á  dos  fuegos,  se 
cuidará  de  voltearlo  para  que  se  cueca  por  parejo,  y  se 
dejará  consumir  hasta  que  con  su  mismo  adobo  y  iranteca 
se  fria,  cuidando  de  que  no  se  queme,  y  así  que  estrf  y  se 
vaya  á  servir,  se  pondrá  en  el  plato  y  se  adorna  con  reba- 
nadas de  cebolla,  aceitunas  y  tornachiles  en  cuartos. 

1,400.  Otro. — Hecho  el  adobo  de  chiles  anchos  y  pasillas 
desvenados,  remojados  y  molidos,  con  suficientes  ajos,  co- 
minos, a  jengibre,  tomillo,  orégano,  vino  y  vinagre,  se  ado- 
bará el  lomo,  sea  entero  6  en  raciones,  y  al  dia  siguiente  se 
le  eolia  agua,  manteca,  y  á  dos  fuegos  se  hará  como  los  an- 
teriores, y  cuando  se  vaya  á  servir  se  adorna  con  aceitunas 

y  chilitos. 

1.404.  Lengua  adobada. — Ya  cocida,  desollada  y  hecha  re- 
banadas, se  adobarán  con  el  adobo  del  lomo  de  cerdo,  y  ya 
quemada  manteca  en  una  cazuela  se  freirá  todo,  se  le  echa- 
rá caldo  de  la  lengua,  y  á  dos  fuegos  acabará  de  consumir 
en  su  mismo  adobo  y  manteca,  y  se  adorna  crn  hojas  de 
perejil,  aceitunas,  chilitos  y  cuartos  de  huevo  cocido. 

1.405.  Chanfaina  adobada.  —Desvenados  y  remojados  dos 
chiles  anchos  se  molerán  con  ajos,  cominos,  pimienta»  cla- 
vos y  pan  remojado  en  vinagre,  se  freirá  todo  esto  en  sufi- 
ciente manteca -con  sal,  y  ya  que  esté*  se  echarán  los  bofes 
é*  hígados  en  trozos  chicos,  tiras  de  jamón,  trozos  de  longa- 
niza y  chorioitos,  todo  cocido  junto,  y  habiéndose  frito  se 
le  agregan  pasas,  almendras,  vinagre,  el  caldo  de  la  asadu- 


4S  * 

ra  colado,  y  te  pondrá  A  do»  fuegos  hasta  que  quede  esposo 
y  sin  caldo,  al  apartarlo  te  le  meada  aceite  y  ee  echan  tor- 
nachile* en  cuarto*. 

1.406.  Otra. — Cortada  la  asadura  en  crudo  j  raciones  no 
muy  chicas,  se  pondrá  á  quemar  poco  menos  de  media  li- 
bra de  manteca  para  cada  una,  y  allí  se  echa  á  que  fría  con 
sal,  y  cuando  ya  está  bien  frita  se  le  agrega  ohiles  anchos 
desvenados,  remojados  y  molidos  con  ajos  y  cominos,  y 
cuando  haya  frito  se  le  echa  orégano,  vinagre,  el  sumo  de 
dos  limones,  aceite,  el  agua  necesaria  para  que  quede  bien 
cocida,  y  poniéndole  fuego  arriba  se  cuidará  de  moverla  y 
cebarle  agua  caliente  si  le  faltare  cocimiento,  y  se  dejará 
hervir  hasta  que  quede  enteramente  seca. 

1.407.  Betabeles  y  zanahoria  en  adobo. — Cocidos  los  beta- 
beles y  sanahorias,  se  pican  menudo  y  se  adoban  con  chiles 
anchos  remojados  y  molidos,  con  poco  ajot  comino  y  clavo; 
pero  sí  bastante  canela,  se  le  agrega  sal  y  orégano,  se  in- 
corpora bien,  se  ata  así,  y  al  dia  siguiente  se-  sacarán  del 
adobo  sin  exprimir,  se  les  echa  suficiente  aceite,  vinagre, 
aguacate,  cebollas  cocidas  deshojadas,  aceitunas,  ohilitos, 
pasas,  almendras  y  ajonjolí  tostado. 

*  1,408.  Calabacitas  en  adobo. — Se  cocerán  en  agna  y  tal, 
serán  chiquitas  y  se  adoban  con  chiles  anchos  bien  desve- 
nados, remojados  y  molidos  con  ajos  y  cominos,  soltado  con 
vinagre,  sasonado  con  sal  y  orégano,  y  se  bañarán  las  cala- 
bacitas, quedando  espeso  el  adobo,  y  si  se  quiere  se  le  echa- 
rá cebolla. 

1,409.  Bagre  adobad* — Dispuesto  el  bagre  hasta  estar 
quitado  el  pellejo,  se  freirá  en  aceite,  y  sacado  se  fríen  chi- 
les anchoa  remojados,  molidos,  pifión,  almendras,  y  así  que 


49 

esté  y -que  no  quede  muy  e«peso  ae  echarán  las  racione»  del 
bagre,  se  cubrirán  del  adobo,  se  les  agrega  aceite  y  se  pon- 
drá  á  dus  fuegos,  y  así  que  haya  consumido  se  saca  con 
cuidado,  se  pondrán  én  el  plato  cubriéndolas  con  todo  su 
adobo,  adornándolas  con  rabanitos  picados,  cebolla  rebana- 
da, aceitunas  y  tornachiles  en  cuartos. 

1 .410.  L>mo  de  cerdo  adobado.  — Rebanado  el  lomo  se  ado- 
ba con  ajos,  chiles  anchos  desvenados,  remojados  y  molidos, 
sal,  mejorana,  orégano,  laurel  y  vinagre,  y  al  siguiente  dia 
se  pondrán  á  cocer,  echándole  agua  la  precisa  á  que  cueza 
la  carne,  manteca  suficiente,  un  terrón  de  azúcar,  y  cuando 
esté  cocido  quedará  seco  como  todo  adobo,  y  para  servirlo 
se  adorna  con  rabanitos  chiquitos  picados  y  abiertos  «n  agua, 
aceitunas  y  chilito.*. 

1.411.  Aeado  de  guajolote  d  la  mexicana. — Se  coje  chile 
ancho  sin  tostar  y  se  pone  en  remojo;  á  quince  chiles  se  les 
mezclan  dos  cebollas  grandes  con  un  poco  de  orégano,  sal  y 
vinagre.  Se  unta  el  guajolote  con  la  mitad  de  esta  salsa, 
después  de  cocido,  y  se  le  mete  al  horno  después  de  ponerle 
en  el  vientre  unas  cebollas  enteras,  sujetando  con  un  palo 
los  costados  del  ave  para  que  no  se  junten;  cuando  se  vol- 
tea el  guajolote  se  le  agrega  la  otra  mitad  de  la  salsa.  Al 
moler  el  chile  se  muelen  también  las  mrllejas,  el  hígado  y 
el  corazón,  ya  cocido  todo;  si  el  guajolote  está  flaco,  antes 
de  untarlo  con  la  salsa  se  le  dá  una  embarrada  de  manteca. 

1 .412.  Otro  guajolote  atado  á  la  mexicana  ~  — Se  fríe  el  gua- 
jolote en  crudo  y  se  descuartiza;  ya  que  se  fríe  bien  se  echa 
en  una  olla  con  laurel,  tomillo,  sal,  pimienta,  vinagre  de  Cas- 
tilla y  ajos  machacados.  Ya  que  se  coció  en  poca  agua  se 
saca,  si  quiere  uno,  6  se  vuelve  á  freír  y  se  sirve  con  ohilote. 


60 

El  chilote  se  hace  mí:  Se  tuesta  chile  peaUla  y  ohilpoole 
•n  manteca,  se  desvena  7  as  raaele  7  allí  miamo  aa  vuelven 
á  echar  laa  Tenaa  7  aa  agrega  pulque,  rebanadas  de  chilea 
en  vinagre,  queso  añejo  machacado,  aceitunas  7  sal. 

1,413.'  QdQina$  en  CHithimeco: — Se  muelen  loa  higaditoa 
de  laa  gallinas  con  ajos  7  bizcochos  tostados  en  manteca,  se 
deslíe  en  agua  todo,  se  fríe  7  se  le  echa  clavo,  canela  7  pi- 
mienta molidas,  un  cuartillo  de  Tinagre  fuerte  7  otro  de 
vino;  se  muelen  unas  avellanas  7  se  agregan  al  caldo  con  pa- 
sas 7  almendras  limpias,  7  cuando  7a  está  sazonado  se  aña- 
de cebolla  cocida  á  parte,  7  las  gallinas  cocidas;  para  servir- 
se se  adornan  con  tostadas  de  pan  fritas  en  manteca. 

1.414.  Ghüaquüe». — Se  hacen  tortillas  de  manteca  7  sal, 
como  de  cuatro  ó*  cinco  dedos  de  largo  7  uno  de  grueso,  bien 
cocidas  en  el  comal,  se  parte  cada  una  de  ellas  en  dos,  par- 
tiéndolas por  la  mitad  del  grueso.  Se  saca  todo  el  migajon 
7  se  rellenan  de  picadillo  de  carne;  se  cierran  laa  mitades 
uniéndolas  por  loa  bordes  con  clara  de  huevo.  Se  lea  echa 
un  polvo  de  harina,  7  se  envuelven  en  huevo  batida  Se 
fríen  después  en  manteca»  se  echan  en  mole  6  pipián  que 
debe  estar  7a  prevenido.  Se  comen  solos  <S  con  costillas  7 
lomo.  . 

1.415.  ChüaquiU$  en  ruedo. — Se  cuece  carne  de  puerco; 
cuando  está  á  medio  cocer  se  le  añaden  chorizos:  7a  cocido 
todo  junto  ae  fríe  7  aa  aparta  del  fuego.  Se  tiene  preparado 
á  parte  olemole,  así  como  unas  tortillas  7  ajonjolí  tostado. 
Se  pone  una  capa  de  carne  7  se  cubre  con  tortillas  7  enci- 
ma se  le  echa  caldo  del  olemole  7  un  puñado,  de  ajonjolí. 
Se  repite  sucesivamente  la  misma  operación  bañando  las 


tortillas  con  manteca  abundante  porque  las  tortillas  embe- 
ben mucha.  Se  deja  calentar  bien  y  se  sirve. 

1.416.  Otro$  chilaquüea. — Se  asan  muy  bien  unos  jitoma- 
te» y  en  seguida  unos  chilchbtitos  verdes,  se  amasan  con  la 
mano 'y  se  írien  muy  bien;  ya  que  está  el  caldillo  muy  bien 
sazonado  se  aparta  de  la  lumbre.  Se  rebanan  unas  tortillas 
en  cuadritos,  se  fríen  á  que  queden  bien  doradas;  y  se  le 
echan  en  el  caldillo  y  asi  que  dan  un  hervor  se  apartan  de 
la  lumbre.  Se  adornan  con  queso  fresco  ó*  añejo  según  el 
gusto;  se  le  puede  añadir  una  rama  de  epasote  al  caldillo. 

1.417.  Chanfaina.  —Se  pone  á  cooer  una  asadura  de  car- 
nero y  después  se  pica  en  trocitos.  En  una  cazuela  se  echa 
media  libra  de  manteca,  un  jitomate  grande,  y  seis  dientes 
de  ajo  picados,  uua  cabeza  de  cebolla  y  se  echa  á  freír  en  la 
manteca,  después  de  frito  el  recaudo  se  echa  la  asadura;  se 
echan  á  remojar  sin  tostar  dos  chiles  colorados,  se  muelen 
y  se  le  echan,  además  un  poquito  de  clavo  y  pimienta;  es- 
tando hirviendo  se  le  echan  cuatro  huevos,  y  cuando  estén 
medio  cocidos  se  revuelven;  á  parte  sé  fríe  carne  de  puerco, 
longaniza,  chorizon,  chorizos  y  un  pollo  muy  bien  dorado  y 
en  raciones,  y  todo  esto  se  le  echa  y  para  servirla  se  le  po- 
ne chiles  en  vinagre  y  aceitunas. 

1.418.  Chanfaina  en  ajo  comino.— &e  rebana  en  crudo  la 
asadura  poniéndola  á  freir  en  bastante  manteca,  se  remojan 
tres  chiles  mulatos  y  se  muelen  con  tres  dientes  de  ajo  y 
unoa  poquitos  de  cominos,  todo  lo  cual  se  echa  en  la  misma 
cazuela  en  que  está  la  asadura,  poniendo  también  una  poca 
de  agua  y  su  sal  correspondiente,  se  deja  en  el  fuego  hasta 
que  espese  el  caldillo.  Para  servirla  se  adorna  con  rebana- 
das de  pan  frito,  de  cebolla  y  de  rábano  y  lechugas. 


1.419.  Chanfaina. — Se  pie»  cebolla  y  se  fríe  en  bastante 
manteca;  cuando  está  dorada,  ae  echa  la  asadura  picada  y  ae 
revuelve,  te  le  echa  aal  y  agua  caliente;  ya  que  hirvió  ae 
muelen  loe  dientes  de  ajo  asado,  pimienta,  clavo,  ajengibre, 
azafrán  y  migajon  de  pan;  se  sazona  con  tantito  vinagre  y 
perejil  deshojado. 

1.420.  Envuelto*  de  chüpoeie  meco  i  tllenoe  de  hueva»  revuel- 
tos.—  Se  toman  los  ohilpocles,  se  queman,  se  toma  también 
chile  mulato  y  patilla,  igual  tanto  de  ambos,  y  del  que  se 
tome  de  chilpocle;  estas  dos  clases  de  chile  so  tuestan  echán- 
dose después  á  remojar;  luego  se  muelen  las  tres  clases  de 
chile,  se  asan  unos  jitomates  que  se  crean  suficientes  y  se 
muelen:  se  pone  una  cazuela  con  una  poca  de  manteca  á  la 
lumbre,  y  ya  que  esta  quemada  se  le  echa  el  chile  á  que 
quede  bien  frico,  después  se  le  incorpora  el  jitomate  y  se  le 
echa  el  caldo  de  la  carne  de  puerco  á  que  quede  bien  espe- 
sito  y  se  sazona  con  sal  al  gusto.  Se  toma  una  sartén,  se  le 
echa  manteca  á  que  se  queme  y  se  van  metiendo  las  torti- 
llas, se  sacan  una  por  una,  después  se  van  metiendo  en  el 
ohile  y  se  van  rellenando  con  los  huevos  revueltos  que  ya 
estarán  preparados,  se  ponen  en  un  plat.  n  encimándolos  y 
al  último  se  les  echa  todo  el  chile  hasta  cubrirlos  bien;  se 
adornan  con  carne  de  puerco  frita,  chorizos,  longaniza  y  su 
queso  añejo  por  encima. 

1.421.  Envueltos  de  nana  Rosa.  -Ya  molida  la  masa  se  le 
agrega  una  poca  de  harina  y  otra  de  manteca,  se  revuelve  y 
se  hacen  las  tortillas  y  crudas  se  les  echa  el  picadillo,  se  le 
embarra  á  la  tortilla  por  la  orilla  tantita  yema  de  huevo  y 
se  envuelven,  se  echan  en  la  manteca  bien  caliente  para  que 
se  doren,  se  ponen  en  el  platón  y  se  cubren  con  ohile  ver- 


*3 

de  6  oolorado  frito,  por  encima  chorizos,  longaniza,  costi- 
llas 7  tiras  de  queso  6  quesadillas. 

1.422.  Otro»  envuelto*. — Se  pone  á  cocer  carne  de  puerco 
y  sin  hueso,  longaniza  7  chorizos;  7a  cocida  se  fríe  bien  do- 
rada 7  se  pisa  gordita:  ya  han  de  estar  los  huevos  revueltos 
con  todos  sus  menesteres  7  el  chile  verde;  se  mete  la  torti- 
lla en  el  chile  7  se  mete  en  un  platón,  se  le  echa  una  cu- 
charada de  los  huevos  7  otra  de  carne;  se  envuelve  7  así  los 
demás,  se  cubren  con  el  chile,  rajas  de  queso  7  tantita  man- 

1 

teca  quemada. 

1.423.  Enchiladas. — Se  desvena  7  tuesta  chile  pasilla,  se 
muele  con  tomates  cocidos  7  se  fríe  en  manteca,  se  le  echan 
todas  especias  menos  azafrán,  carne  7  sal  7  se  deja  hervir. 

1 .424.  Tortillas  enchiladas  llamadas  de  las  Citóles.  — Se  asan 
jitomates,  se  muelen  con  unos  chiles  huauchinangos  colora- 
dos 7  :e  fríen.  A.  parte  se  fríen  en  manteca  las  tortillas,  que 
se  rellenan  con  faldas  de  puerco  desbaratadas  en  hebras  7 
se  enchilan  con  el  chile  7a  dicho. 

1.425.  Enchiladas  ilustradas. — Se  prepara  chile  ancho,  7 
si  no  hay,  del  que  pique  menos;  pepitas  de  culantro,  un  pe- 
dazo de  nuez  moscada,  clavo,  canela,  pimienta,  un  poco  de 
tomillo  7  la  sal  necesaria;  todo  esto  se  muele  7  se  fríe  junto. 
Ha  de  quedar  el  caldo  espesito,  echándole  el  agua  cuando 
7a  casi  esté.  Se  muele  queso  añejo;  se  pica  bastante  cebolla 
en  ruedas  delgada»;  y  perejil. 

Se  pone,  en  la  lumbre  una  sartén  con  manteca  7  allí  se  so- 
fríen violentamente  las  tortillas,  que  no  han  de  ser  ni  grue- 
sas ni  delgadas;  sacándolas  de  la  manteca  se  meten  en  el  cal- 
dillo preparado  antes,  que  se  ha  de  conservar  caliente.  Así 
que  se  empaparon  bien  se  sacan,  se  ponen  en  un  platón  7  se 


les  echa  el  «jumo,  oeboHa  y  perejil,  cerne  de  puerco  frita  en 
pedaeitas,  chorison,  aceitunas,  alcaparras  y  chiles  en  vina- 
gre  y  ee  enrollan. 

Se  pone  un  pedaso  de  queeo  freeoo  en  agüe  caliente,  ee 
parte  eetirándolo  para  qoe  forme  hebras,  y  con  ella»  ee  dan 
unas  vueltas  por  encima  de  las  tortilla»  ya  enrolladas  como 
para  sujetarlas. 

1.426.  ChayotuUe*.. — Se  rebanan,  se  piean  jitomates,  ce- 
bolla, ajo  y  perejil;  se  pone  á  freir  todo  este  recaudo;  ya  que 
está  bieu  frito  se  aparta  de  la  lumbre  y  se  le  añade  nn  poco 
de  queso  anejo;  se  rellenan  con  esto  los  chayotestles  y  se 
cubren  con  huevo  batido  como  para  chiles  rellenos;  se  fríe 
una  poca  de  harina  con  unes  cebollas  en  gsjos  y  unos  dien- 
tes de  ajo;  ya  que  está  la  harina  dorada  se  le  echa  agua  sufi- 
ciente y  se  deja  sasonar;  poco  antes  de  servirlos  se  echan 
los  chayotestles  en  esta  salsa. 

1.427.  Otros  chayotestU*. — Se  pica  jitomate  muy  menudo, 
doble  cantidad  de  cebolla,  unos  dientes  de  ajo,  se  fríe  todo 
esto,  ya  que  está  bien  frito  se  le  echa  agua  suficiente,  sal, 
una  remita  de  epazote,  un  chilpocle  frito;  se  pican  loe  cha- 
yotestles en  ouadritos,  se  echan  en  la  salsa  y  se  dejan  saso- 
nar. 

'  1,428b  Baja*  con  huevo. — Se  tuestan  los  chilchotes,  ya  que 
están  se  pelan,  se  hacen  rajas,  se  pica  mucha  cebolla  y  se 
fríe,  ya  q*:e  está  se  echan  las  rajas;  se  fríen  unos  huevos  á 
parte  y  luego  se  revuelve  todo  junto  y  se  le  echa  una  poca 
de  agua. 

1,429.  Hejoies  con  guato.  — Se  ponen  á  cocer  los  hejotes,  ya 
que  están  cocidos  se  rebana  un  poco  de  queso,  se  hace  una 
capa  de  hejotes,  otra  de  queso  y  encima  mas  hejotes,  esto 


•e  fríe  con  huevo  como  chile  relleno;  se  hace  un  caldillo  co- 
mo para  los  chiles  y  se  echan  allí  los  hejotes. 

1.430.  Tinga  escandalosa. — Se  ponen  á  cocer  papas,  se  pe- 
lan y  se  pican;  se  fríe  cebolla,  longaniza,  chorízon,  carne  de 
puerco  maciza  y  chorizos  y  allí  se  revuelven  las  papas,  de- 
jando que  se  fría  bien  todo  junto:  ya  frito  se  sirve  con  chil- 
pocles  en  vinagre,  aguacate  y  cebolla  rebanada. 

1.431.  Tinga  poblana. — Se  limpian  los  pollos,  se  parten 
én  raciones  y  se  ponen  á  cocer;  se  pican  bastantes  jitomates, 
cebolla,  ajo  y  perejil,  se  fríe  todo  esto  en  suficiente  mante- 
ca, ya  que  está  bien  fritó  se  le  echa  un  poco  de  caldo  de  los 
pollos,  junto  con  la  carne  se  le  echa  la  sal  necesaria  y  se  de- 
ja sazonar;  cuando  ya  le  falte  poco  se  le  echan  unos  chupo- 
oles  en  vinagre  hechos  rajas,  se  limpian  unas  sardinas  y  se 
le  añaden  también;  estando  casi  seco  se  aparta  de  la  lum- 
bre y  se  sirve  adornado  con  hojas  de  lechuga  y  aguacate 

.por  encima. 

1.432.  Otra  tinga. — Se  hace  lo  mismo  que  la  anterior, 
con  la  diferencia  que  la  carne  ha  de  ser  de  puerco  bien  fri- 
ta y  con  trozos  de  longaniza,  se  adorna  con  lechuga,  rába- 
nos bien  adornados,  aguacate  y  queso  anejo  por  encima. 

1.433.  Tinga.  — Se  pica  mucha  cebolla,  ajos,  chilpocles  en 
vinagre,  todo  esto  se  pone  á  freir  muy  bien ;  ya  que  está  de 
buen  sazón  se  le  agrega  longaniza  y  carne  de  puerco  también 
frita;  al  separarlo  de  la  lumbre  se  le  echa  una  cucharada  de 
aceite  y  unas  rebanadas  de  queso*  fresco. 

1.434.  Tinga  caliente. — Se  cuece  ohilpocle,  se  hacen  pe- 
dacitos  y  se  lava  muy  bien;  se  pone  la  cazuela  con  manteca^—- 
y  aceite;  se  pica  cebolla  gorda  y  jitomate;  se  fríe  y  después 
se  le  incorpora  el  chilpocle  y  se  deja  refreír  todo  junto;  se 


.r 


cuece  una  montalaya,  se  fríe  y  se  echa  en  la  cazuela;  te 
adorna  con  queeo  fresco  y  aguacate. 

1.435.  Tinga  firia, — Se  oojen  chilpooles  en  vinagre  y  te 
hacen  pedacitos,  ae  les  quitan  las  venas  y  ae  les  e  .ha  cebolla 
rebanada,  aceite  y  aguacate. 

1.436.  Tinga  de  chile  nuco.  — Se  desvenan  los  chiles  en  cru- 
do la  víspera  y  se  echan  en  agua  de  sal;  á  otro  dia  se  les 
quita  esa  agua,  se  despedazan,  se  ponen  á  freir  en  manteca 
y  un  poco  de  aoeite  con  jitomate,  cebolla  y  ajo,  todo  bien 
picado;  ya  que  esté  bien  frito  se  le  echa  agua,  sal  y  unas 
calabacitas  tiernas  en  rebanadas.  Ta  que  está  todo  cocido 
se  aparta  de  la  lumbre,  se  adorna  con  carne  de  lomo  frita, 
longaniza,  chorizos,  costillas  y  chorison,  todo  frito;  y  por 
encima  cebolla  rebanada,  aguacate,  lechuga,  rábano,  aoeite 
y  queso  añejo. 

1.437.  Bacalao  á  la  toluqucfta  con  chile  ancho. — Se  remo* 
ja  desde  la  noche  antes  chile  ancho  en  buena  cantidad,  en 
proporción  al  bacalao  y  se  desvena;  al  dia  siguiente  se  mue- 
le con  ajoa,  pimienta  y  clavo:  esto  se  fríe  en  aceite  y  lo  de- 
más en  manteca;  cuando  ambas  cosas  están  se  incorporan 
con  el  caldo  mencionado  y  se  echa  el  bacalao  cruda  Se  de- 
ja oocer  y  se  espesa  con  pan  remojado  molido.  Se  sirve 
echándole  por  encima  aceite,  perejil  picado,  aceitunas  y  tor- 
nachiles hechos  pedazos. 

1.438.  Bacalao  codeflo. — Se  remoja  el  bacalao  de  un  dia 
para  otro  y  se  pone  á  oocer  en  una  olla  bien  tapada.  Se  pica 
cebolla,  jitomate  y  ajo;  se  asan  unos  chiles  verdes  y  se  ha- 
cen rajas.  Este  recaudo  debe  ser  en  doble  cantidad  del  ba- 
calao que  se  guisa  6  por  lo  menos  debe  ponerse  en  la  pro 
porción  siguiente: 


57 

Para  una  libra  de  bacalao  se  toman  ocho  chiles  y  doce  ji- 
tomates que  no  se  han  de  picaj  mucho,  sino  que  queden  gor- 
ditos  los  trozos. 

8o  pone  una  tortera  con  aceite  y  manteca,  se  fríe  este  re- 
caudo que  debe  quedar  bien  frito,  y  en  seguida  se  pone -una 
capa  de  pescado,  otra  de  recaudo  y  al  último  se  le  eoha  un 
poquito  de  caldo  del  pescado,  se  pone  á  fuego  manso  y  un 
comal  con  lumbre  por  encima. 

BARBACOA 

1,490.  Modo  de  prepararla. — Se  abre  en  la  tierra  un  hoyo 
como  de  una  vara  y  proporcionado  al  tamaño  de  la  carne 
que  se  quiere  cocer.  Se  ponen  en  él  fondo  del  hoyo  unas 
piedras  y  sobre  ellas  ramas  y  tronquitos  para  formar  una 
lumbrada,  que  se  ha  de  mantener  lo  menos  dos  horas  para 
que  la  tierra  quede  bien  caliente.  Hecho  esto  queda  ya  la 
tierra  en  disposición  de  recibir  la  carne,  y  se  saca  la  leña 
dejando  las  piedras,  que  han  de  quedar  muy  calienten.  Ya 
limpio  el  suelo  se  moja  un  petate  nuevo  bastante  y  se  en- 
vuelve en  él  la  carne,  que  debe  estar  preparada  como  se 
preparan  los  asados  ordinariamente:  se  cubre  después  la  car- 
ne con  unos  palos,  sobre  los  cuales  se  coloca  otro  petate  mo- 
jado también,  procurando  que  ninguna  parte  de  la  carne 
quede  descubierta.  Se  tapa  después  el  petate  de  encima  con 
una  ligera  capa  de  tierra,  la  su6ciente  para  que  el  petate  no 
se  queme;  y  «obre  ella  se  enciende  bastante  lumbre,  que. se 
mantiene  viva.  A  las  ocho  horas  queda  la  carne  cocida  y  sin 
haber  perdido  la  sustancia,  lo  que  la  hace  en  extremo  gus- 
tosa. 


1.440.  Adteriewtia. — Par»  preparar  la  carne  que  ae  quie- 
re guisar  en  barbacoa,  te  emplea  un  método  muy  sencillo: 
ae  pone  á  remojar  chile  ancho;  ya  remojado  ae  muele  con 
unos  comino*  y  unos  dientes  de  ajo;  á  esta  salsa  se  le  di  el 
nombre  de  chile-ajo.  Se  embarra  bien  1a  carne  con  mante- 
ca y  encima  ae  embarra  bien  con  el  chile-ajo  y  se  envuelve 
en  el  petate. 

Otros  usan  el  tomate  de  cascara  en  vez  del  chile,  y  se  ha- 
ce lo  mismo  que  se  ha  dicho  antes. 

1.441.  Cochinito,  en  barbacoa.— Se  remoja  chile  mulato, 
se  desvena,  se  lava  y  muele  oon  dos  6  tres  cabezas  de  ajo  y 
unos  pocos  de  cominos  y  sal;  se  lava  la  eochinita,  se  escur- 
re y  enjuga,  se  tasajea  y  se  embarra  con  el  chile;  se  unta 
oon  manteca  una  tortera  grande  en  que  quepa  la  cochina, 
y  ae  manda  al  horno;  6  sino  se  hace  un  hoyo  en  la  tierra 
como  de  dos  6  tres  cuartas  6  lo  que  sea  necesario,  se  echan 
unas  piedras,  cascajo  y  mucha  leña,  se  le  prende  fuego  de- 
jándolo hasta  que  se  consuma;  en  un  petate  nuevo  y  bien 
rociado  con  agua  se  envuelve  la  cochina,  se  amarra  y  se  echa 
al  agujero,  luego  una  tabla  y  en  seguida  la  tierra;  se  está 
allí  veinticuatro  horas;  pasadas,  se  saca  y  se  sirve  con  chi- 
lote.  Se  puede  hacer  con  carnero,  cabrito,  venado,  etc. 

1.442.  Borrachito. — Se  ponen  en  una  olla  retazos  de  car- 
ne de  puerco  oon  sal  y  la  manteca  suficiente  para  que  en 
crudo  se  frían  dichos  retazos,  se  pica  gordita  cebolla,  jito- 
mate, ajo  y  perejil  y  todo  esto  se  echa  en  la  olla;  ya  que  to- 
do se  frió  bien  se  le  echa,  para  cada  libra  de  carne,  tlaco  de 
pulque  y  otro  tanto  de  agua  y  se  pone  todo  á  hervir  hasta 
que  espese;  su  sal  correspondiente.  Para,  servirlo  se  adorna 
con  chiles  en  vinagre,  alcaparras  y  aceitunas. 


1 ,448.  QuttadiU'ii.  — Tan  comunes-  ton  las  quesadilla*  q ue 
no  hay  esquina  donde  no  puedan  comprarse,  lo  cual  evita  el 
Hacerlas  en  familia.  Sin  embargo,  hablaremos  de  ellas  te- 
niendo presente  que  no  en  todas  partes  se  pueden  conseguir 
ruando  se  deseen. 

Se  hacen  con  masa  de  Ins  tortillas  y  se  rellenan  generalmen- 
te con  chicharran  molido,  chile  paailla  tostado,  un  poquito 
de  epazote  y  sal;  ya  puesto  el  relleno  en  la  mitad  de  ellas, 
se  dobla  jw  encima  la  otra  mitad  y  se  pegan  las  orillas,  he- 
cho  lo  cual  se  fríen  en  manteca.  Ka  preciso  comerlas  calien- 
tes para  que  no  se  ponqan  dnras. 

Las  quesadillas  se  rellenan  de  distintas  cosas,  como  sesos, 
flores  de  calabacitas  bien  picadas,  ch ^rizones  desmenuzados 
y  rajas  de  chile,  etc.  Es  un  bocado  muy  sabroso  á  la  hora 
de  almorzar. 

1,444.  Oirás  quesadillas,  — Se  cuece  maíz  en  poca  cantidad 
de  at(tia,  ya  cocido  se  apea  de  la  lumbre  y  se  deja  secar;  se 
muele  y  se  cierne,  y  se  mezcla  el  polvo  con  manteca  derre- 
tida; se  le  echa  sal  y  poca  agua  de  teq  o  esquite  quo  ha  de 
¿star  bien  asentada;  se  ha  de  batir  bien  para  que  la  masa 
quede  compacta.  Con  esta  masa  se  forman  unas  tortillas  pe- 
queñas que  se  polvorean  con  harina  y  se  llenan  con  queso 
fresco  6  añejo  desmoronado,  y  epazote.  Hay  diferentes  mo- 
dos de  rellenarlas,  y  por  ser  una  cosa  tan  conocida  creemos 
innecesario  decirlo  aquí.  Una  vez  rellena  la  tortilla  se  do- 
bla la  mitad  que  se  deja  vacía  sobre  la  otra  mitad  que  está 
rellena,  pegando  las  orillas;  se  polvorean  de  nuevo  con  ha- 
rina y  se  fríen  en  manteca  muy  caliente,  que  debe. echárse- 
les también  por  encima  con  la  cuchara  para  evitar  que  es- 


pon  jen.    Ta  bien  fritas  se  dejan  escurrir  y  se  sirven  inme- 
diatamente. 

1.445.  Adoverae  de  quuo. — Estas  se  preparan  con  el  que* 
•o  fresco  que  ya  se  está  picando,  qne  se  muele  con  un  poco 
de  sal  y  se  aprensa  como  es  costumbre,  cubriéndole  con 
una  capa  del  chile-ajo  y  se  deja  secar  en  la  prensa. 

1.446.  Entomatado.  — Se  lavan  muy  bien  unos  tomates  y 
se  pican  muy  menuditos  juntamente  con  ajo  y  cebolla  y  se 
pone.á  freir,  se  sancochan  unos  pedazos  de  carne  de  puerco 
y  se  le  echan,  se  dora  un  pedazo  de  pan,  clavo  y  canela,  se 
muele  y  se  le  echa  todo,  junto  con  un  poco  de  aceite  de  co- 
mer, un  polvo  de  orégano  y  unos  chilpocles  en  vinagre." 

1.447.  Otro  entomatado. — Se  pone  á  cocer  carne  de  puer- 
co, ya  que  está  á  medio  cocer  se  le  echan  chícharos  y  cala- 
bacitas, después  se  pica  el  tomate  crudo,  cebolla  picada, 
ajos,  todo  lo  cual  se  frie  en  una  cazuela  con  la  carne,  sa- 
ciándole después  el  caldillo  con  los  chícharos  y  las  calaba- 
zas. Se  le  agrega  orégano  seco  y  un  poco  de  aceité  de  co- 
mer y  su  sal. 

1.448.  Petathimbre.  —Se  ponen  á  cocer  calabacitas  con  sal 
y  se  dejan  enfriar  después  de  cocidas;  se  muele  cuartilla  de 
chile  ancho  remojado  y^desvenado,  cominos  y  media  cabe- 
za de  ajos,  se  le  agrega  vinagre"  para  aguarlo  y  se  le  incor- 
poran las  calabacitas  con  un  poco  de  orégano.  Al  servirlas 
se  les  echa  aceite  y  queso. 

1.449.  üarhanzos  en  aceite.' — Se  echan  á  remojar  con  un 
polvo  de  ceniza;  al  dia  siguiente  se  les 'quita  esa  agua  y  se 
ponen  á  cocer  en  agua  clara;  ya  que  están^bten  cocidos  se 
ponen  á  enfriar  y  ya  que  están  bien  fritos  se  mondan.  Al 
dia  siguiente  se  pone  una  olla  con  medio  cuartillo  de  aceite, 


61 

Me  echan  á  remojar  tres  chile»  anchoa,  **  muelen  con  un 
diente  de  ajo  y  se  echan  en  el  aceite  á  que  ae  frían  con  el 
mismo  aceite;  ya  que  están  bien  sazonados  se  echan  los  gar- 
banzos A  que  don  otro  hervor  y  se  apartan  para  servirse. 

1,450.  Frijoles  guineos — Se  ponen  á  cocer  con  bas+ante 
tequesquite,  se  lavan,  se  tuestan  en  la  manteca,  se  muelen 
con  bastantes  almendras  tostadas,  se  les  echa  esto  con  agua 
caliente,  manteca,  sal,  longaniza  y  ave. 

1,451. .  Frijoles  wracrwanos. — Para  este  guiso  solo  se  usan 
los  fríjoles  serranos.  Se  lavan  para  quitarles  el  polvo  y  se 
cuecen  en  agua  con  un  poco  de  manteca;  ya  cocidos  se  apar* 
tan.  En  una  cazuela  se  fríen  en  aceite  unos  dientes  de  ajo 
rebanados,  que  se  sacan  del  aceite  en  cuanto  estén  dorados; 
en  el  mismo  aceite  se  fríe  una  poca  de  cebolla  picada;  ya  que 
está  se  echan  los  frijoles  con  el  agua  en  que  se  cocieron.  De 
estos  se  apartan  antes  dos  6  tres  oucharadas  que  se  muelen. 
Una  vez  echados  los  frijoles  on  la  cazuela  se  les  agrega  man- 
teca, unas  rebanadas  de  cebolla,  los  fríjoles  que  se  molieron 
y  la  sal  correspondiente;  se  deja  oonsumir  el  caldo  y  refreír 
los  fríjoles;  cuando  se  están  refriendo  con  bastante  mante- 
ca se  machacan  con  la  cuchara  y  se  les  vá  echando  un  po- 
co de  pan  rallado  y  se  dejan  refreír  hasta  que  formen  una 
especie  de  molote;  se  sirven  muy  calientes. 

1452.  Otros  fríjoles  veracnaanos. — Después  de  cocidos  se 
lavan  y  se  les  echa  una  poca  de  cebolla  frita,  chile  colorado 
molido,  nnos  pedazos  de  pichón  y  otros  de  pechuga  de  ga- 
llina, han  de  quedar  cargaditos  de  manteca,  después  se  les 
agrega  un  poco  de  vino  Jerez. 

1,453.  Fríjoles  ihistrados. — Se  cuecen  sin  tequesquite  los 
frijoles  prietos,  después  de  cocidos  se  vacian  en  una  cazne- 

VK  OOOINVRA  POBLAX k*  — TOlf.  U. 


la,  m  toma  ana  sartén  y  te  fríen  con  bastante  manteca  y  to- 
do recaudo  de  oooina,  se  lee  muele  ol*vo  y  canela,  chiles, 
aceituna*,  choraos,  longaniza  y  un  poquito  de  vinagre. 

1 ,464  Frijolee  corriente».  — 8e  limpian  loe  frijolea  y  ae  cue- 
cen en  agua  de  teq Desquite;  ya  oocidos  se  bajan  de  la  lum- 
bre y  se  les  deja  que  reposen  un  rato,  y  se  vacian  en  una 
cazuela  para  que  se  enfrien;  luego  se  ponen  en  una  olla  con 
un  poco  de  manteca  y  después  de  algún  tiempo  se  les  echa 
agua  de  la  misma  en  que  se  cocieron  y  agua  natural.  Hecho 
esto  se  ponen  en  la  olla  unos  rabos  de  cebolla,  manteca  en 
proporción  y  una  rama  de  epazote;  se  ponen  á  hervir  y  des- 
pués que  hayan  hórrido  se  dejan  á  fuego  maneo  para  que 
espesen* 

1 .466.  Revoltijo.  — Se  haoe  mole  de  papas,  se  le  echan  unos 
clavos  y  un  pedazo  de  oanela  y  lo  que  se  coje  oon  tres  de- 
dos de  anís.  Se  cuecen  chícharos,  bojotes,  fríjoles  blancos 
y  unos  pooos  de  frijoles  corrientes,  pero  guisados.  Las  cala- 
bacitas se  guisan  á  parte  y  se  le  echan  camarones  oocidos. 
Las  bolitas  se  hacen  oon  huevo  y  polvo  de  camarón  y  por 
fin  se  le  echan  los  huevos  batidos. 

1 ,466*.  Revoltijo  con  camaronee. — Se  limpian  he  jotes  y  chí- 
charos y  se  ponen  á  hervir;  se  limpian  los  camarones,,  se  po- 
nen á  hervir  y  ya  que  está  todo  esto  cocido  se  pone  una  ca- 
zuela con  manteca  en  la  lumbre,  se  le  echa  una  poca  de  ce- 
bolla en  gajos.  Ya  que  está  frita,  se  echan  los  hejotes  y  loe 
chícharos;  ya  que  están  en  sazón  se  echan  los  camarones 
juntamente  oon  el  agua  en  que  hirvieron.  Se  asan  tres  6 
cuatro  chuchóte*  verdes  y  se  le  echan  en  rajas.  Se  dejan 
hervir  un  rato  y  se  bajan  de  la  lumbre. 

1.467.  Revoltijo  de  la  Soledad. — Se  echa  á  remojar  ohfle 


63 

ancho,  se  desvena  y  §e  muele  con  ajo;  luego  se  frie  cebolla 
y  allí  se  echa  el  chile  á  que  se  fría,  se  le  revuelven  unos  hue- 
vos y  cuando  estos  *e  cocieron  se  echan  frijoles  prietos  y 
blancos  guisados  a  parte,  calabacitas  también  guisadas,  se 
revuelve  todo  y  luego  se  echan  hejotes,  chícharos,  quelites, 
aceleas  y  papas  picadas,  partidas  y  cocidas;  luego  se  hacen 
iinss  tortitas  de  camarón  6  de  pan  y  queso,  y  se  le  echan  al 
revoltijo;  después  se  quema  manteca  v  se  lé  echa  encima. 
1,468.  Revoltijo.—  Se  cuecen  frijoles  blancos,  chícharos, 
panas,  ^calabacitas  v  hejotes,  se  hace  pipián  de  ajonjolí  tos- 
tado v  se  fríen  meditas  pequeñas  de  camarón,  chile  ancho 
remojado  y  refresado  y  se  frie  al  hacer  el  pipián;  la  verdu- 
ra se  fríe  separada,  y  luego  se  junta  todo  al  pipían  y  se  le 
revnelve  huevo  batido  á  que  no  se  conozca  el  huevo  y  sí 
quede  compacto. 

1.459.  Nopalito*— Be  quitan  al  nopal  todas  las  espinas  y 
"  el  extremo  inferior  de  la  hoja,  se  cortan  en  rebanadas  co- 
mo hejotes  <S  en  cnadrítos,  v  se  ponen  a  cocer  en  agua  de 
tequesquite  para  que  suelten  la  baba.  Ya  cocidos  se  fríen 
con  ajo  v  cebolla  picada;  cuando  están  ya  dorados  seles  po- 
ne la  siil  necesaria  y  se  echan  en  la  manteca  unos  chiles  an- 
ches enteros,  se  deis  consumir  el  caldillo  y  se  apea  echán- 
dole aceite  v  vinagre. 

1 .460.  Nóvale*  navegantes — Limpios  los  nopales,  se  cortan 
en  tiros  á  lo  largo,  se  cuecen  en  agua  de  tequesquite  en  una 
tortera.  Después  se  pone  una  cazuela  en  la  lumbre  con  man- 
teca que  se  deja  calentar  mucho  y  se'echan  los  nopales  á  que 
se  doren  con  unas  ruedaa  de  cebolla  y  el  agua  {competente, 
se  le  agresran  unas  "hojas  de  epazote  y  unos  chiles  pasillas. 
Se  dejan  sazonar  y  al  apearlo  se  les  echa  bastante  aceite. 


64 


1.461.  Nopal*»  moderno*.  — Se  limpian  Iqp  nopales,  te  eue> 
oen  en  agua  de  tequezquite  después  de  partirlos  en  rebana- 
das á  lo  largo;  se  lavan  bien,  después  se  pone  la  cazuela  en 
la  lumbre  con  un  poco  de  manteca,  y  aceite,  y  allí  se  fríen 
los  nopales  sin  echarles  agua  para  nada;  se  les  agrega  un  po- 
co de  epazote  y  un  poco  de  queso  fresco  en  rebanadas  y  la 
sal  correspondiente.  Han  de  quedar  secos. 

1.462.  Nopale»  en  jitomate.  —Se  pican  bien  unos  chiles 
verdes,  jitomates  crudos  abundantes  y  unos  ajos,  y  se  fríen 
en  manteca.  A  parte  se  cuecen  los  nopales,  y  ya  que  están 
cocidos  se  echan  á  la  fritura  dicha  y  se  deja  que  embeban 
bien  la  sustancia.  Se  les  agrega  después  cebolla  muy  menú* 
dita,  olaTd,  pimienta  y  cominos,  todo  molido  con  polvo  de 
pan  frito  en  manteca  y  un  polvo  de  orégano.  Se  le  echa  por 
encima  aceite,  vinagre  y  se  deja  hervir  para  que  sazone. 

1.463.  Quelite»  frito*. — Después  de  quitadas  las  raíces  y 
lavados  los  quelites,  se  ponen  á  cocer  con  un  poquito  de  te- 
quezquite asentado;  en  seguida  se  pone  una  cazuela  con 
manteca  á  la  lumbre  y  allí  se  fríen  jitomates  maduros,  pi- 
cados grueso,  cebollas  y  ajos,  se  echan  allí  los  quelites,  des* 
pues  de  lavados  con  un  poco  de  agua,  y  unas  rajas  de  chile, 
se  sazona  con  sal  y  cuando  están  bien  fritos,  se  sirven  con 
sus  rebanadas  de  pan  frito  en  manteca. 

1464.    Quütonüe». — Se  limpian  y  ponen  á  cocer  en  agua 

simple;  ya  cocidos  se  escurren  del  agua  y  se  pican;  se  ponen 

-en  una  cazuela  con  manteca,  cebolla  picada  gordíta,  ajo  y 

-sal  suficiente,  Cuidando  que  queden  espesos.    Se  hace  salsa 

con  chile  mulato  y  ajo,  y  con  ella  se  toman. 

1 ,465.  Chayóte»  rellenos.  — Se  preparan  seis  chayotas  q  oe 
están  deeason  y  se  sancochan  con  agua,  se  eacurren.  y  de- 


6* 

jan  enfriar.  Después  se  parten  á  lo  largo  en  dos  mitades, 
se  extrae  la  pulpa  interior  procuraudo  que  les  quede  entera 
la  cascara.  Be  hace  una  üiasa  de  la  pulpa  que  se  extrajo  y 
se  le  agrega  una  tasca  de  asacar  blanca  molida,  un  poco  de 
canela,  cuatro  huevos  batidos  y  cuatro  cucharadas  de  man- 
tequilla. Bien  amasado  todo  se  rellenan  las  cascaras,  y  por 
encima  se  polvorean  con  bizcocho  molido,  se  pone  al  fuego 
una  cazuela  con  manteca,  se  tapa  con  un  comal  con  lumbre 
y  se  dejan  dorar.  Se  apartan  de  la  lumbre  y  se  dejan  en- 
friar un  poco  para  servirlo». 

1 .466.  Calabacita*  rtlUna*.  — Se  cuecen  las  calabacitas  con 
sal,  ya  oo.idas  se  les  quna  la  pepita  por  un  lado,  se  enju- 
gan, se  rellenan  de  picadillo,  se  echa  manteca  en  una  tor- 
tera y  se  van  pasando,  encima  se  les  echa  el  chilote  de  jito- 
mate, se  pone  al  fuego  y  se  deja  consumir  á  que  quede  po- 
co caldo,  se  le  echa  sal,  dulce,  vinagre,  pasas,  almendras, 
aceitunas  y  rebanadas  de  jaiuon. 

1.467.  Ayocotes  compuexto*. — Be  cuecen  los  ay ocotes  con 
tequesquite  y  después  se  lavau;  se  sazonan  en  la  olla  y  se 
apartan  unos  pocos  para  molerlos;  se  echan  en  la  olla  con 
un  poco  de  manteca,  laurel,  tomillo  y  sal,  ya  que  están  sa- 
zonados, se  muelen  los  que  se  apartaron  y  se  fríen  con  ce- 
bolla, y  encima  se  echan  los  de  la  olla;  ya  que  se  están  frien- 
do se  les  echa  un  poco  do  clavo  y  canela  molida. 

Se  cuecen  á  parte  unos  retazos  de  carne  de  puerco  y  se 
fríen,  y  allí  mismo  se  fríe  un  pedazo  «le  longaniza  en  crudo, 
ave,  chorizos  y  chorizones,  todo  frito.  Se  revuelve  todo  en 
los  ayocotes,  advirtiendo  que  todos  los  retazos  han  de  hervir 
con  los  ayocotes;  lo  demás  se  coloca  encima  cuando  ya  van 


G6 

á  servirte.  Se  adorna  coa  queso  mortajado,  chüpvuieseu  vi- 
nagre y  cebolla  rebellada  y  estarán  muy  buenos. 

1,460.  CuíUuoucíh*. — Jlistos  ae  ponen  a  cocer  en  agua  con 
su  sai %  ya  que  lo  estau  se  sacan  escurriéndoles  el  agua  y  se 
fríen  con  bastante  mauteca  y  bastante  cebolla  picada  menu- 
da, sus  hujas  de  educóte,  rajas  de  chüoüotee  y  rebanadas  de 
queso  Iresoo. 

l,4btf.  MuuxtnvU  — de  muelen  los  jitomates  suncientee, 
en  cruao  con  cnücnotito*  huauchinangos;  se  pone  una  ca- 
zuela en  la  luinore  uou  manteca,  en  la  cual  se  trie  el  jitoma- 
te y  los  chileno  ti  tos  mondos;  desque*  se  le  echa  el  coito 
blanco  ó  de  chicharrón  con  el  uiuuio  caíanlo  en  que  se  co- 
ció el  chito,  y  su  sal  correspondiente ;  ja  que  lalta  poco  pa- 
ra que  esté  sazonado  se  muelen  los  guaje*  maitajudos  á  que 
solo  dé  un  hervor. 

1.470.  Alvttjoue*. — tíe  ponen  a  cocer  eii  aguu  y  uu  poco 
de  tequesquite,  se  les  quita  esta  agua  y  se  guiaan  como  los 
frijoles  poniéndolos  en  mas  agua  con  su  sal;  después  se  po- 
ne á  cocer  carne  de  puerco  en  retazos,  y  ya  cocida  se  frie 
con  gajos  de  cebolla  y  allí  se  echan  los  alverjones  con  su 
caldillo,  unos  chilpocles  fritos  y  un  poco  de  tomillo. 

1.471.  Verdolaga»  en  moU  de  ehilpodc — Se  ponen  á  cocer 
las  verdolagas  y  á  parte  carne  de  puerco  en  retazos  con  su 
sal;  se  remojan  unos  chilpocles  y  se  muelen  con  unos  dien- 
tes de  ajo;  se  frie  la  carne,  se  saca  y  allí  mismo  se  frie  el 
ohilpocle;  se  escurren  las  verdolagas,  se  pican  y  echan  en  el 
chilpoole  frito  con  la  carne  y  un  poco  del  mismo  caldo  en 
que  ésta  se  coció. 

1.472.  Totopas  dé  ternera. —Se  pica  carne  de  ternera  y  se 
muele,  se  le  sacan  los  nervios  para- que  quede  bien  molida; 


«7 

se  parte  un  huevo  y  se  revuelve  con  la  carne,  ae  le  echa  sal 
y  pimienta  y  se  empiezan  á  formar  loe  totopos;  se  fríen  y  se 
sirven  oon  rebanadas  de  cebolla,  aceitunas  y  alcaparras. 

1473.  ToiopotUe*  de  carne. — Se  pica  y  muele  una  libra  de 
ternera  macis*  con  un  diente  de  ajo;  en  seguida  se  le  mez- 
cla una  yema  de  huevo,  pan  rallado,  pimienta  en  polvo, 
unas  gotas  de  limón  y  la  sal  suficiente:  cuando  está  bien  re- 
vuelto, se  va  moliendo  á  la  orilla  del  metate  para  que  las 
telas  de  carne  vayan  colgando  como  totopostles;  en  segui- 
da se  fríen  en  manteca  y  so  sirven  solos  ó*  con  aceite  y  vi- 
nagre. 

1,474.  Molotes  de  carne. — Se  aplana  la  carne  y  se  rellena 
de  garbanzos,  jamón  y  acelgas;  se  amasan  oon  pito,  se  fríen 
bien  y  cuando  se  están  friendo  se  les  echa  unos  jitomates 
sin  semillas  y  especias  para  que  quepo  con  una  salsita;  para 
«ervirse  se  le  echan  unas  rebanadas  de  jamón  y  alcaparras. 


1,476.  AUde  cernua.  — Se  remoja  maíz  en  proporción  del 
atole  que  se  quiere  hacer  y  se  le  agrega  un  poco  de  agua  en 
la  cual  se  apaga  antes  un  poco  de  cal  viva.  &e  deja  asentar 
hasta  que  el  mais  se  pone  amarillo  y  se  pone  á  la  lumbre 
con  su  propia  agua;  luego  se  aparta  de  la  lumbre  para 
quitarle  el  pellejo.  Después  de  reposado  y  bien  frío  se  la- 
va en  mucha  agua,  se  restrega  con  la  mano  para  que  quede 
muy  limpio  y  se  muele  muy  remolido.  Se  echa  la  masa  en 
agua,  se  deslíe  y  pasa  por  tamiz;  se  echa  en  una  olla  que 
«e  pone  ai  fuego  y^se  deja  hasta  que  espese  lo  necesario, 
meneándolo  con  frecuencia  para  que  no  se  queme.    Debe 


68 

menearae  con  un»  oucu&ra  de  palo  que  no  tenga  uinguua 
grasa,  pero  que  no  tea  nueva,  porque  ai  la  cuchara  es  de 
metal,  ae  corta  el  atole;  y  si  ea  de  palo  y  tiene  grasa  saca 
un  sabor  desagradable. 

1,470.  Atole  de  leche. — Esto  se  hace  con  leche  que  se  en- 
dulza al  gusto  de  cada  uno  al  hervir  el  maíz  para  cocer,  ó 
echándola  después  de  cocido  y  haciendo  que  dé  otro  hervor. 
.La  misma  operación  se  hace  con  huevo,  almendras,  aula, 
arroz,  piñones,  etc. ,  y  entonces  el  atole  lleva  el  nombre  de 
las  sustancias  que  forman  esta»  discintas  composiciones. 

1,477.  Chile-atole. — ¡Se  muelen  uno»  chiles  verdes,  un  po- 
co de  epazote  y  dos  ó  tres  hojas  verdes  de  calabaza,  todo  lo 
cual  se  mezcla  con  el  atole  y  la  sal  suficiente.  También  se 
le  echan  anos  elotes  desgranados  y  otro»  en  rebanadas. 


PULQUES  COMPUESTOS. 

1,478.  Pulque  de  apio, — A  veinticinco  cuartillos  de  pul- 
que fino,  fuerte,  se  le  muele  el  apio  suficiente  hasta  que  que- 
de de  un  buen  color  verde,  procurando  que  esta  operación 
se  haga  en  el  metate  con  un  poco  del  pulque  y  sin  agua; 
después  de  mezclado  el  apio  se  le  echa  al  pulque  una  y  me- 
dia libras  de  azúaar,  meneándolo  todo  bien  para  que  incor- 
pore y  .después  secuela. 

1479.  Pulque  coloiado.—Se  mondan  diez  ó  doce  tunas 
coloradas  6  pitayas,  las  cuales  se  ponen  á  hervir  con  una  po- 
ca de  agua,  dos  6  tres  clavos  de  especia,  dos  ó  tres  pimien- 
tas y  una  poca  de  canela,  todo  esto  molido.  Ya  que  hirvió 
bien  se  quita  del  fuego  y  en  frío  se  echa  en  los  veinticinco 


69 

cuartillos  de'pulque,  con  libra  y  media  de  azúcar,  movien- 
do todo  bien.  Después  se  cuela. 

Con  estos  dos  pulques  y  del  blanco  suficientemente  endul- 
zado, se  llenan  vasos  que  llaman  de  las  tres  garantías.  Pa- 
ra esto  se  dispone  una  rueda  delgada  de  madera  ó  cartón, 
un  poco  mas  chica  que  el  vaso,  y  con  un  agujero  pequeño 
en  su  centro,  por  el  cual  so  va  echando  suavemente  prime- 
ro el  pulque  colorado,  después  el  blanco  y  por  último  el 
verde,  consiguiendo  así  que  no  se  mezclen  y  conservando 
cada  uno  su  color. 

-  1,480.  Pulque  de  anona. — Para  veinticinco  cuartillos  de 
pulque  fresco,  se  toman  dos  6  tres  anonas,  según  su  tama- 
ño, las  cuales  se  mondan  y  quitan  las  pepitas;  la  pulpa  que 
quede,  con  una  libra  de  azúcar  se  revuelve  bien  con  el  pul- 
que, el  cual  se  cuela. 

Para  el  de  pina  y  naranja  se  hace  lo  mismo  que  el  ante- 
rior: para  los  veinticinco  cuartillos  una  pina  molida  con  su 
cascara  y  una  y  media  libras  de  azúcar;  para  el  de  naranja 
por  cada  veinticinco  cuartillos  de  pulque,  docena  y  media 
de  naranjas  agrias* 

1.481.  Pulque  de  almendra. -r- A  veinticinco  cuartillos  de 
pulque  una  libra  de  almendra  molida,  libra  y  media  de  azú- 
car y  seis  yemas  de  huevos,  todo  mezclado  muy  bien. 

Hay  tantos  modos  de  curar  el  pulque  y  son  tan  conoci- 
dos que  creemos  inútil  reproducir  aquí  el  modo  de  curarlos,  . 
convencidos  de  que  es  inútil  su  explicación. 

1.482.  Campechana.  —Para  doce  cuartillos  de  pulque, 
seis  de  agua,  un  cajete  de  panela^blanca  y  un  poco  de  clavo 
pimienta  y  canela,  todo  molido  con  media  pina.  Se  muele 
todo  bien,  se  deja  fermentar  y  se  cuela. 


70 

1.483.  Tepachi. — Se  pone  á  hervir  un*  mancuerna  de  pm- 
neln  con  un  poco  de  anís  y  uno*  clavo»  en  suficiente  canti- 
dad de  agua,  y  todo  mezclado  en  veinte  cuartillos  de  pulque. 

1.484.  Chicha. — Se  muele  una  pina  y  se  pone  en  una  olla 
con  seis  cuartillos  de  agua,  unos  tamarindos,  dos  clavos, 
una  raja  gorda  de  canela,  doco  pimientas  y  las  cascaras  de 
la  pina  machacadas.. 

Se  tapa  bien  la  olla  y  se  pone  al  sol  y  al  sereno  tres 
Se  cuela  el  dia  que  se  ha  de  tomar  y  se  deja  al  fresco. 


w&m&  mmmk 


PASTELERÍA 

1,486.  Advertencia. — Antes  de  explicar  la  fabricación  de 
los  diferentes  objetos  de  pastelería,  de  que  nos  vamos  á  ocu- 
par, nos  ha  parecido  oportuno  dar  á  nuestros  lectores  algu- 
nos conocimientos  sobre  la  calefacción  del  horno,  y  los  di- 
ferentes grados  á  que  debe  ponerse,  según  lo  exijan  las  pas» 
tas  ó  masan 

.  Se  conoce  que  un  horno  está  caldeado  ó  caliente,  cuando 
restregando  un  palo  fuertemente  en  Ja  bóveda  6  en  el  hogar, 
saltan  algunas  chispitas,  en  cuyo  estado  se  cierra  el  hor- 
no, y  al  cabo  de  un  pequeño  rato  empieza  -el  primer  grado 
de  temperatura,  del  que  nacen  los  seis  siguientes: 

1.  °  Llamado  horno  ardiente, — Este  se  obtiene  como-  he- 
mos indicado,  se  limpia,  el  horno  quitándole  la  brasa  y  ce- 
niza con  un  palo,  barriéndolo  después,  y  por  último,  pasán- 
dole un  trapo  empapado  en  agua  y  atado  á  un  palo  largo. 
Acabada  esta  operación,  se  vuelve  á  cerrar  y  al  cabo  de  un 
cuarto  de  hora  se  puede  utilizar,  cociendo  las  empanadas 
de  relleno  de  carne;  los  timbales,  pastas  de  levadura,  ote* 


72 


2.  °  Horno  manto.  —Después  de  una  hora  de  haberte 
aprovechado  la  temperatura  antecedente,  el  horno  ha  per- 
dido íieceauírianiente  su  fuerza,  y  se  reduce  á  este  segundo 
grado,  á  propósito  para  cocer  las  tortas  de  entrada,  los  pas- 
teles de  frutas,  las  masas  hojaldradas,  etc. 

3.  °  Horno  regular. — Habiendo  servido  una  hora  el  hor- 
no manso,  ó  dos  horas  después  del  horno  ardiente,  se  ob- 
tiene la  temperatura  regular,  en  la  que  se  cuecen-  los  bollos, 
pastas  de  almendrados,  los  panecillos,  etc. 

4.  °  Horno  templado. — Pasada  una  huía  de  la  tempera- 
tura anterior,  queda  el  horno  templado,  el  que  se  emplea 
para  cocer  las  diferentes  clases  de  bizcochería.  <*» 

5.  °  Horno  tuave. — Esta  temperatura  empieza  al  cabo  de 
una  hora  que  ha  servido  el  horno  templado,  y  se  aprovecha 
para  cocer  cierta  clase  de  budines,  soplillos,  bollo.,  meren- 
gues, etc. 

6.  °  Homo  flojo. — Se  encuentra  el  horno  en  este  grado 
cuando  ha  declinado  su  primera  temperatura  por  espacio  de 
cinco  horas  consecutivas,  cuyo  grado  se  emplea  para  los 
mere  agües  secos,  suspirillos,  etc. 

Es  esencialísimo  graduar  el  horno  como  acabamos  de 
explicar,  porque  el  buen  éxito  de  los  objetos  de  pastelería, 
depende  casi  siempre  de  este  requisito. 

1,486.  Modo  <U  preparar  la  pasta. — Póngase  en  una  me- 
sa limpia  un  montón  de  dos  libras  de  harina;  hágase  ün 
agujero  en  medio  y  échese  eu  él  media  onza  de  sal,  un  cuar- 
terón de  manteca,  seis  yemas  de  huero  y  medio  cuartillo 
de  agua;  mezcles*  todo  hasta  que  se  incorpore  con  la  hari- 
na, y  se  amasa  añadiendo  un  poco  de  agua;  esta  masa  se  ha- 
ce mas  dura  ó  mas  blanda,  y  sirve  para  hacer  torta*. 


1 ,48?.  Afaxíi  para  bollo*.  -  -Se  empieza  por  hacer  levadura. 
Para  este  efecto,  póngase  nn  montón  de  harina  sobre  1*  me* 
sa,  como  ana  cuarta  parte  de  la  que  se  ha  de  emplear.  &* 
hace  un  agujero  en  medio,  se  echa  en  él  levadura  de -cerve- 
za, vertiendo  agua  tibia  por  encima,  y  se  amasa-bien.  H«' 
cho  esto  se  pone  la  masa  en  una  batea;  se  la  hacen  dos  cor* 
taduras  en  cruz,  se  cubre  con  un  paflo  y  se  deía  fermentar. 
Se  emplea  una  onza  de  levadura  por  libra  de  harina  ama**' 
da  con  ella  6  de  otro  modo  por  cada  cuatro  lihrA*  de  ma«a. 
Cuando  la  levadura  haya  adquirido  la  calidad  que  se  tequie 
re,  amásese  á  parte  el  resto  de  la  harina  con  mantequilla* 
huevos  y  sal  fina;  únase  la  levadura,  dóblese  la  masa  mu- 
chas veces,  expolvoreándola  con  harina.  Dijese  reposar  ocho 
horas,  al  menos,  antes  de  hacer  los  bollos.  Se  ponen  gei»*- 
raímente,  por  cada  libra  de  harina  un  buen  cuarterón  de 
mantequilla,  tres  huevos  y  dos  gramos  de  sal. 

1.488.  Afosa  crocante  6  que.  m*?*  al  mauvirln.  — Amásense* 
almendras  machacadas,  bien  secas  con  igual  cantidad  d* 
azúcar  en  polvo,  humedeciéndolo  poco  á  poco  con  claras  d* 
huevo  batidas  y  alguias  gotas  de  agua  de  flor  de  naranja,  ' 
mas  6  menos,  según  su  espesor.  Evapórese  esta  masa  á  fue' 
fgo  lento  en  un  cazo;  pángase  en  un  pan  sobre  la  mesa  par* 
que  se  enfrie  antes  de  emplearla. 

1.489.  Paxta  para  mata*. — "Póngase  en  ana  enceróla  un 
cuartillo  de  agua,  un  cuarterón  de  mantequilla,  unas  cor* 
tacitas  de  limón  picadas,  un  cuarterón  de  azúcar  y  un  poco 
de  sal;  pángase  á  hervir,  y  antes  de  que  principie  se  retira 
y  se  le  quitan  las  cortezas  de  limón,  añadiendo  harina  poca 
á  poco,  tanta  como  pueda  abaorver  el  agua;  se  menea  con* 
tinuaraente  y  se  pone  al  fuego  cinco  6  seis  minutos,  sin  de" 


74 

jar  de  menear;  y  cuando  la  pauta  este*  en  tu  punto  se  cono* 
cera,  porque  se  desprende  de  la  cacerola:  entonces  se  tras* 
lada  á  una  cazuela  vidriada,  y  se  le  añaden  huevos  uno  á 
uno,  hasta  que  la  pasta  se  pegue  á  los  dedos;  báñese  con 
manteca  y  harina  un  platón,  y  coloqúese  encima  esta  pasta 
en  pedazos  del  grueso  de  tina  nuez;  añádansele  almendras 
picadas  con  azúcar  molida,  y  ae  mete  en  el  horno;  de  esta 
pasta  nueden  hacerse  bollos,  dándoles  la  figura  que  se  quie- 
ra; debe  cocerse  á  horno  templado. 

1,490.  Pasta  pata  empanada»,  flane»  y  tarta». — Se  hace 
con  dos  libras  de  harina,  libra  y  media  de  manteca,  media 
onza  ne  sal,  cuatro  huevos  batidos  y  dos  vasos  de  agua :  há- 
gase una  pasta,  revolviéndolo  gradualmente  y  sin  amasarlo, 
y  extiéndase  con  el  palote  como  la  pasta  hojaldrada. 

1,401.  Mana  de  empanada». — Tómese  menos  demedia 
Cuartilla  de  harina,  dos  libras  de  mantequilla,  y  una  libra  de 
gordura  de  vaca,  derrítase  la  mantequilla,  la  grasa,  y  espú- 
mese bien  antea  de  incorporarlas  en  ta  harina,  añádanse 
seis  yemas  de  huevo  y  suficiente  cantidad  de  agua  muy  ca- 
liente, amásese  mucho  tiempo  y  arróllese  machas  veces. 

1.492.  Masa  dura. — Mézclese  una  libra  de  fariña  con 
poco  menos  de  mantequilla,  afládase  un  poco  de  agua  fría 
y  suficiente  cantidad  de  sal,  amásese  con  el  palote  y  cuíde- 
se que  quede  bien  dura. 

1.493.  diosa  en  hoja*. — Tómese  una  libraMe  mantequilla 
por  libra  de  harina,  mézclese  la  masa  bien  blanda,  añadien- 
do agua  fria;  se  aplasta  con  el  palote  hasta  que  quede  del 
espesor  de  un  peso;  tíntese  bien  la  superficie  con  mantequi- 
lla, se  dobla  por  la  mitad,  se. pasa  el  palote  de  nuevo  y  se 


75 

solverá  á  untar  de  mantequilla  y  harina  tantas  veces  como 
}ic>  jas  se  den  á  la  mata.  Lo  menos  son  tres. 

1,494.  Masa,  doblada. — Extiéndase  la  harina  sobre  la  me* 
ga.,  hágase  un  agujero  en  medio,  y  póngase  para  ufa  cuarte* 
fctfi  de  harina  cinco  de  mantequilla  en  pedacitos,  una  onza 
el ^  sal  y  suficiente  cantidad  de  agua  para  hacer  una  masa 
t>Í6n  espesa;  mézclese  por  pequeñas  -porciones,  y  después 
nryíásese  con  todo  la  fuerza  posible.  Conviene  no  emplear 
¿«ata  mas  que  dos  horas  después  de  confeccionada. 

1,496.  Pauta  hojaldrada. — Sobre  una  mesa  limpia  se  po- 
n^n  dos  libras  de  harina,  formando  en  medio  un  agujero, 
e^i  el  cual  je  echa  media  onza  de  sal,  dos  claras  de  huevos, 
d^8  cucharadas  de  agua  y  un  cuarterón  de  manteca.  Se  reo* 
n  ^  la  pasta  y  se  deja  reposar  por  media  hora;  al  cabo  de  e*« 
t^i  tiempo  se  extiende  la  pasta  con  un  palote,  cubriéndola 
c^m  una-  libra  de  mantequilla,  qne  se  deshará  bien.  Si  está 
fl  fme,  se  vuelve  á  dejar  reposar,  y  después  se  pliegan  lo» 
d  os  extremos  de  1a  pasta  sobre  1*  mantequilla  6  manteca  de 
rr^anera  que  quede  bien  cubierta,  y  se  deja.  El  modo  de 
A^nasar  es  el  siguiente:  Se  extiende  la  pasta  con  el  palote 
1  Vasta  que  no  tensa  sino  un  dedo  de  espesor,  y  se  la  dobla 
*»  ií  tres  pliegues:  se  le  dan  cnatro  vueltas,  á  fin  de  que  lo 
01  ue  quedaba  de  lado  quede  por  delante,  y  se  le  vuelve  á 
ptasar  el  palote.  Esto  es  lo  que  se  llama  ana  vuelta  de  masa ; 
operación  que  se  repite  cuantas  veces  sea  necesaria,  y  se  de* 
j^i  descansar  la  masa  hasta  que  el  horno  esté  caliente.  En* 
tronces  se  le  dá  otro  par  de  vueltas. 

Girando  se  pone  tanta  mantequilla  como  harina*  necesita 
o*tnco  vueltas,  y  cuando  hay  tres  cuartas  partes  de  mante> 
guilla  6  manteca  para  una  de  harina,  necesita  seis. 


76 

l,4ft&  Pasta  poní  bnfUm,  p<tMt*Uto*y  torio*,  etc. — En  dos 
libra*  de  harina,  quete  pondrán  encima  de  ana  mesa  muy 
limpia,  se  hace  en  ella  un  agujero  en  medio,  y  en  él  se  echa 
media  onza  de  sal,  un  cuarterón  de  mantequilla  ¿manteca, 
seis  Temas  de  huevo  y  medio  cuartillo  de  agua.  9e  mesóla 
todo  hasta  que  se  incorpore  con  la  harina,  y  se  amasa,  aña- 
diendo un  ñoco  de  agua.  Esta  masa  se  hace  mas  dura  6  mas 
blanda;  según  el  uso  que  de  ella  se  haga. 

1.497.  PfittA  rsdietUe. — Se  hace  con  la  pasta  regular  ▼  pa- 
ra ponerla  a  cocer  se  llena  de  harina:  después  se  retira  y  se 
nnita  la  harina,  en  su  lugar  se  mete  dentro  un  guiso  de 
merluza,  tornera,  hongos,  artos  o*  1«i  que  se  quiera,.  Kste  pas- 
tel puede  cocerse  en  el  hornillo  6  sobre  cenizas  calientes. 

1.498.  Pa*t'l  rrto. — La  carne  que  se  destine  4  la  compo- 
sición de  un  pastel  debe  estar  pasada  por  manteca,  como  la 
de  guajolotes,  liebres,  cañones,  conejos,  que  se  deshuesan, 
pero  se  defo  entera  la  de  los  patos,  pichones  ▼  perdices.  TC1 
jamón  debe  también  cocerse  de  antemano,  v  todo,  excepto 
esto  rfltimo.  deh*  mecharse  con  pedazos  mas  ¿..menos  grue- 
sos y  sazonado*.  Acabados  estos  preliminares,  se  toma  un 
trozo  de  pasta  preparada  v  se  hace  una  bola  6  un  ovalo,  aplas- 
tándolo y  reduciéndolo  al  grueso  de  un  dedo  sobre  dos  ho. 
jas  dé  papel  de  estraza,  de  la  figura  que  se  le  ha  de  dar,  de- 
jando á  la  pasta  un  ribete  de  tres  o*  cuatro  dedos.  Se  colo- 
can dentro  las  carnes,  llenando  los  intervalos  con  relleno. ' 
Se  aprieta  .con  las  manos  para  hacer  de  todo  una  masa  y.  se 
cubre  todo  con  lonjas  de  jamón:  se  forma  con  la  pasta  una 
cubierta,  en  medio  de  K  cual  se  hace  una  abertura,  en  que 
se  arrolla  una  cartulina:  se  cuece  A  fuego  vivo,  en  donde 
debe  permanecer  por  lo  menos  tres  horas;  se  le  quita  la 


77 

cartulina,  cerrando  la  abertura  con  un  poco  de  la  misma 
pasta. 

1,499.  Pastel  ingle*  llamado  dt  Liverpool. — Se  pone  al 
fuego  una  cazuela  con  medio  cuartillo  de  leche  pura  y  cuan- 
do está  tibia  se  irá  echando  poco  á  poco  tres  puñados  de  ha- 
rina, revolviéndola  sin  cesar,  y  cuando  ya  no  forme  bolitas 
se  echa  un  poco  de  sal,  un  pedazo  de  manteca  y  un  cuarte- 
rón de  queso  Gruyere  sin  rallar,  sino  cortado  en  rebanadas 
muy  delgaditas.  Se  sigue  meneando  la  mata  hasta  que  está 
perfectamente  mezclado  todo.  Se  conoce  que  está  cocida  si 
revolviéndola  con  la  cuchara  se  desprende  fácilmente  de  la 
tortera.  Entonces  se  aparta  del  fuego,  se  añaden  tres  hue- 
vos, perfectamente  batidos  y  se  mantiene  caliente  hasta  el 
momento  de  servirla.  Ta  que  está,  se  pone  al  fuego  una 
tortera  untada  de  manteca,  se  pone  á  un  fuego  templa- 
do pero  vivo  en  la  tapa;* y  se  baten  diez  minutos  para  que 
el  pastel  quede  muy  agradable  á  la  vista  y  sabroso  al  pa- 
ladar. 

1,500.  Pastel  de  tuétano. — Se  amasa  una  libra  de  harina 
flor  con  una  cucharada  de  mantequilla  dura  y  agua  suficien- 
te para  poderla  amasar,  una  libra  de  tuétanos  de  vaca,  que 
se  cuecen  para  quitarles  los  huesitos  y  se  muelen  con  el 
mismo  palote.  Ta  limpios  se  extiende  la  masa  poniendo  el 
tuétano  que  se  cubrirá  doblando  la  masa;  ésta  se  palotea 
volteándola  sodre  el  palote,  se  le  da  otro  doblez  y  se  vuelve 
á  palotear,  y  hecho  esto  cuatro  6  cinco  veces,  se  deja  la  ma- 
sa de  un  grueso  regular  y  se  corta  el  pastel,  poniéndole  ala 
orilla  mas  tiras  de  la  misma  masa.  En  medio  se  pone  un 
papel  á  que  forme  hueco  cubriéndole  con  mas  masa  para 
que  sirva  de  tapa. 

LA  C0CINXHA  POBLANA. — TüM  II— C. 


78 

Se  rellena  de  carne  de  pollo  guisada,  6  déla  que  te 
quiera. 

Estos  pastelea  se  pueden  hacer  chicos  y  redondos,  relle- 
nándolos de  ostiones,  camarones,  picadillo,  menudencias 
de  gallina,  ríñones,  criadillas  ó*  sesos.  Se  bate  en  una  tasa 
la  clara  y  yema  de  un  huevo,  se  untan  con  esto  los  pastelea 
por  encima  y  se  meten  al. horno. 

1,501.  Otro  pastel  de  carne. — Sé  muele  con  tres  yemas  de 
huevo  media  libra  de  harina,  cuatro  onzas  de.  manteca  der. 
retida,  onza  y  media  de  azúcar  remolida,  y  después  de  bien 
incorporado  todo  se  deja  reposar  la  masa  dn  rato;  luego  con 
la  mitad  de  ella'  se  forma  una  tortilla  para  cubrir  el  fondo 
de  una  sartén  y  se  pone  á '  cocer  á  dos  fuegos;  ya  que  está 
cocida  se  pone  encima  picadillo  como  el  de  los  chiles  y  con 
el  resto  de  la  masa  se  forma  otra  tortilla  para  cubrir  la  car- 
ne. Se  vuelve  á  poner  á  dos  fuegos  hasta  que  dore,  despol- 
voreándole azúcar  por  encima. 

1 .602.  Pastel  inglés  6  volovan.  — Se  pone  á  remojar  en  leche 
una  torta  de  pan  frío;  se  baten  doce  huevos  como  para  freir- 
los,  y  con  ellos  se  bate  una  libra  de  mantequilla  fresca  y  ti- 
bia; se  saca  el  pan  de  la  leche  que  se  desbarata  bien  para  • 
revolverlo  con  los  huevos;  se  les  echa  una  libra  de  azúcar 
bien  molida,  media  onza  de  canela,  pasas,  almendras  y  aci- 
trón. Hecho  esto  se  extiende  una  servilleta  untada  con 
mantequilla  dura,  se  echa  en  ella  todo  lo  dicho,  y  juntadas 
las  cuatro  puntas  se  ata  y  se  pone  en  un  cazo  de  agua  hir- 
viendo para  que  cueza,  y  así  que  esté*  duro  como  tamal,  se 
sacan  y  hacen  rebanadas  que  se  cubren  de  azúcar  y  canela 
en  polvo. 

1.603.  Pastel  de  mantequilla. — Se  extiende  en  una  mesa 


79 

poco  mas  do  una  cuarta  de  libra  de  harina,  tres  huevos  en- 
teros y  un  poco  de  sal,  la  mitad  de  una  cucharada  de  man- 
teca, un  poco  de  agua  de  tequesquite,  y  todo  se  menea  mu- 
cho hasta  que  haga  ojos  6  vejigas';  entonces  se  extiende  con 
un  palote  á  que  quede  de  un  grueso  regular,  y  se  le  van  po- 
niendo bolitas  de  mantequilla  hasta  que  cubran  la  mitad  de 
la  masa;  se  dobla  encima  la  otra  mitad  como  si  quisieran 
hacer  rabióles;  se  vuelve  á  doblar  y  palotear;  se  hacen~unos 
agujeros  en  la  masa  y  se  le  va  echando  el  resto  de  la  libra 
de  harina,  hasta  consumir  la  libra  de  mantequillla.  No  pue- 
de tocarse  la  masa  con  la  mano,  sino  con  el  palote  6  con  un 
cuchillo. 

Ta  que  e¿tá  bien  amasado,  se  extiende  del  grueso  de  un 
dedo  6  poco  menos,  so  corta  con  un  molde  y  se  pone  á  fue- 
go lento.  Se  ponen  en  una  cazuela  á  la  lumWe,  ya  que  co- 
mienzan á  cocerse  se  da  á  las  pastas  un  baño  de  manteca 
con  las  barbas  de  una  pluma,  y  se  les  cubre  con  azúcar  en 
polvo;  se  tapa  la  cazuela  con  un  comal  hasta  que  acaben  de 
cocer,  procurando  que  no  queden  muy  dorados:  una  vez  co- 
cidas se  vuelven  á  cubrir  de  azúcar. 

1,504.  Pattel  de  mantequilla  con  carne.  —Se  amasa  suave- 
mente una  libra  de  harina  con  agua  y  un  poquito  de  sal 
hasta  que  al  ponerle  el  dede  se  sube,  se  extiende  oonel  pa- 
lote y  se  le  pone  una  libra  de  mantequilla;  se  le  dan  cuatro 
dobleces  como  servilleta,  se  vuelve  á  extender  con  el  palo- 
te y  se  le  dobla  después  por  la  mitad.  Esta  operación  se  re- 
pite siete  veces;  entonces  se  hace  el  pastel  y  se  pone  en  una 
lata  humedecida  con  agua;  el  pastel  se  unta  por  fuera  con 
huevos  batidos  y  cuando  está  á  medio  coeer  se  le  echa  un 
polvo  de  azúcar. 


80 

1,005.  Otro. — Sobre  una  meta  muy  limpia  se  pone  media 
libra  de  harina;  se  lea  echan,  tres  huevos,  media  cucharada 
de  manteca,  un  poco  de  sal  y  un  poco  de  agua  de  teques- 
quite.  Se  amasa  todo  hasta  que  hace  ojos  y  se  extiende  con 
un  palote  haciendo  que  la  masa  quede  lo  mas  delgada  posi- 
ble. Se  toma  una  libra  de  mantequilla  que  debe  haber  es- 
tado en  agua  para  que  endurezca  y  se  van  haciendo  con  ella 
bolitas  que  se  Tan  ochando  sobre  la  mitad  de  la  masa,  que 
se  cubre  con  la  otra  mitad  como  si  fuese  quesadilla.  Esta 
operación  se  repite  hasta  que  el  tamaño  de  la  quesadilla  que- 
de muy  reducido.  Entonces  se  extiende  con  el  palote  y  pa- 
ra que  no  se  pegue  á  la  masa  se  va  echando  harina  en  otro 
montón  de  media  libra  de  harina  y  se  tí  haciendo  la  mis- 
ma operación  de  laa  bolitas  hasta  que  se  concluya  con  todo. 
Se  extiende  de  nuevo  con  el  palote,  se  deja  la  masa  del 
grueMo  de  un  dedo. poco  mas  6  menos,  se  corta  con  moldes, 
los  recortes  se  vuelven  á  extender  con  el  palote  sin  tocarlos 
porque  ae  echan  á  perder:  ae  cuecen  en  horno,  y  cuando 
comienzan  á  alzar  ae  lea  dá  con  pluma  un  baño  de  manteca 
y  mantequilla,  luego  ae  le  echa  por  encima  un  polvo  de  acu- 
car para  que  forme  costritas.  Al  servirlo  se  le  echa  mas  azú- 
car en  polvo  por  encima. 

1,606.  Otro  de  mantequilla. — En  una  mesa  se  pondrá  una 
libra  de  harina  buena  y  bien  floreada,  se  juntará  con  agua 
y  sal,  y  se  suavizará  con  toda  la  manteca  necesaria  para  so- 
barla; así  que  está  se  dejará  tapada  por  un  rato,  después  se 
irá  extendiendo  en  hojas  muy  delgadas  y  untadas  de  man- 
tequilla derretida  y  fría,  se  irán  enrollando  del  grneso  que 
se  quiera,  y  aplanadas  con  el  bolillo  se  cortará  la  masa  del 
tamaño  que  haya  de  ser  el  pastelón,  se  unta  de  mantequilla 


81 

el  platón,  y  se  le  pondrá  por  fondo  y  relleno  nn  picadillo* 
agregándole  trocí  toa  de  jamón  y  pollo  tierno  cocido  y  en  pe- 
dazos, aceitunas,  tornachiles  en  cuartos,  alcaparras, •^alca- 
parrones, pasas  y  almendras  á  que  quede  de  un  alto  pro* 
porcionado,  y  se  cubrirá  con-  otra  masa  igual  á  la  de  abajo, 
sea  de  una  pieza  ó  en  tres  6  cuatro:  cargando  una  sobre  otra 
por  los  ladcs  para  que  cuando  este*  cocido  forme  como  nu- 
be; y  si  se  quiere  tejido,  se  cortará  la  masa  en  tiras  dea  dos 
dedos,  se  hará  un  tejido  crusado,  y  con  otra  tira  grande  se 
taparán  á  la  orilla  del  platón  todas  las  puntas  del  tejido;  y 
así  se  meterá  al  horno  de  buen  temple,  para  que  no  quede 
crudo  y  se  aplane,  ni  tampoco  se  queme;  y  cuando  ya  este', 
al  apartarlo  se  le  echará  azúcar  cernida  para  que  se  le  pe- 
gue. De  esta  misma  masa  se  hacen  chicos  de  picadillo  6 
pescado,  y  empanadas  con  leche. 

1,607.  Pastelón  de  almendra,  piñones  y  natillas, — A  una 
libra  de  harina  se  le  echarán  tres  huevos,  dos  con  clara  y 
uno  sin  ella,  una  poquita  de  levadura  deshecha  en  una  po- 
ca de  agua  de  tequezquite  sentado,  menos  de  media  taza 
de  mantequilla  y, otra  de  manteca  derretida,  medio  pocilio 
dé  vino  generoso,  azúcar  cernida  cuanto  á  que  apenas  le  salga, 
el  zumo  de  dos  limas  agrias  y  la  agua  que  necesitare;  se  ama- 
sa y  soba  hasta  que  este*  suave,  y  se  pueden  hacer  las  torti- 
llas confo  las  del  anterior,  y  en  todo  lo  demás  se  hará  lo  mis- 
mo, excepto  el  relleno  que  será  como  sigue;  Se  molerá  me- 
dia libra  de  almendras  remojadas  y  sin  cascara  con  otra  me- 
dia de  piñones,  se  incorpora  todo  esto  con  una  libra  de  azú- 
car cernida,  v  na  taza  caldera  bien  llena  de  natillas,  seis  ye- 
mas de  huevo  y  una  cuarta  de  canela  en  polvo.  Si  la  masa  de 
tste  ae  quiere  qne  sea  la  del  anterior,  bien  se  puede  variar. 


82 

1,608.  Pastel  de  harina.  -4  A  medía  libra  de  manteca  bien 
lavada  y  batida  con  la  mano  hasta  que  este*  muy  fofa  y  ten- 
ga muchos  ojos,  se  le  escarie  todo  el  agua,  se  le  echan  doi 
yemas  de  huero,  cuatro  onzas  de  azúcar  bien  molida,  lo  que 
se  coje  con  tres  dedos  de  sal,  muy  remolida,  y  se  le  echa 
una  libra  de  harina  flor;  hecho  esto  se  amasa  de  modo  que 
quede  suave,  se  le  echan  tres  gotas  de  aceite,  se  mete  en 
una  sartén  untada  de  manteca  y  se  v%n  friendo  tortülitai 
hasta  cubrirlo  bien;  se  tapa  con  un  comal  con  lumbre  enci- 
ma y  así  que  está  cocido  se  pone  á  dos  fuegos  lentos.  Se  le 
echa  por  encima  azúcar  en  polvo. 

1.509.  PasUL — Para  cuatro  libras  de  harina  seis  huevos, 
tres  con  clara  y  tres  sin  ella,  una  taza  de  agua  de  tequesqui- 
te,  un  poco  de  vino  Jerez,  una  poca  de  sal,  medio  de  man- 
tequilla; se  amasa  muy  bien,  se  extiende  con  el  palote,  se 
hace  una  rueda  según  el  tamaño  de  la  sartén,  se  le  despolvo 
rea  harina,  unos  pedacitos  de  mantequilla  y  una  hoja  di 
masa;  así  se  va  poniendo  hasta  seis  hojas  y  encima  el  pica 
dillo  con  todo  su  recaudo;  se  ponen  otras  hojas  de  masa  en 
cima  y  al  rededor  sus  pellizcos  como  empanada,  luego  st 
mete  al  horno. 

1.510.  Pastel  americano. — Se  clari6ca  una  libra  de  azúca* 
y  ya  clarificada  se  le  echa  una  libra  de  ciruelas  pasas,  se  de 
ja  que  tome  punto  alto,  cuando  está  de  este  punto  se  le 
quitan  los  huesos. 

En  una  tabla  se  pone  una  libra  de  harina  flor,  se  hace  ui 
montón  y  en  el  centro  se  ponen  dos  huevos  enteros,  y  do 
solo  las  yemas,  un  polvo  de  sal  y  cosa  de  tres  onzas  de  azú 
car  en  polvo,  un  pocilio  de  agua  de  tequesquite,  y  cosa  d 
doce  onzas  de  mantequilla,  se  amasa  todo  muy  bien  y  se  de 


83 

• 

ja  reposar  un  poco.  Entre  tanto  se  anta  la  cazuela  con  man* 
toquilla,  y  la  tercera  parte  de  la  masa  se  palotea,  á  que -que- 
de del  grueso  de  un  cigarro  gordo  y  de  la  figura  de  la  cace* 
rola;  se  pone  á  cocer  á  dos  fuegos  y  ya  que  este*  se  pone  la 
conserva  y  se  cubre- con  otra  parte  de  lá  masa  que  también 
se  palotea;  se  vuelve  á  poner  á  que  dore,  y  ya  que  le  falta 
poco  se  le  unta  una  poca  de  mantequilla  y  con  el  resto  de 
la  masa  se  adorna  al  gusto  de  la  persona  que  lo  hace,  y  se 
le  pone  el  resto  de  la  mantequilla  que  por  todo  ha  de  ser 
una  libra;  se  vuelve  á  poner  á  que  acabe  de  cocer  y  que  que* 
de  bien  dorado,  y  se  sirve  caliente. 

l,bll.^Otro$ pattditos  de  mantequilla. — A.  una  libra  de  ha- 
rina floreada  se  echarán  tres  onzas  de  mantequilla,  dos  hue* 
vos,  uno  con  clara  y  otio  sin  ella,  y  la  agua  que  necesite  á 
que  quede  la  masa  tierna,  y  así  que  ya  este*  amasada  se  echa- 
rá en  la  mesa  una  poca  de  harina  expolvoreada  y  sobre  ella 
se  pondrá  la  masa,  se  extenderá  con  el  palote  6  bolillo,  se 
le  untará  mantequilla  fria,  se  envolverá  como  puro  y  se  vol- 
verá á  extender,  y  así  se  estará  untando,  enrollando  y  ex- 
tendiendo por  tres  6  cuatro  ocasiones,. y  la  última  se  exten- 
derá pero  no  delgada,  sino  algo  gruesa;  porque  entonces  ya 
se  cortan  los  pastelitos,  se  les  hace  con  el  dedo  un  hoyito  en 
medio  y  se  rellenarán  de  alguna  leche,  se  tapan  con  otra 
ruedecita  mas  chica  y  se  meterán  al  horno,  y  después  de  co- 
cidos se  les  echará  asacar  cernida. 

1,512.  Otra  masa  para  pastdon  ó  pastelitos.  — Puesta  en  la 
mesa  una  libra  de  harina  se  le  echarán  dos  huevos,  uno  con 
clara  y  otro  sin  ella,  una  poca  de  manteca  fria,  sal  y  agua, 
y  se  amasa,  y  quedará  correosa,  y  en  haciendo  vejigas  ya 
está;  entonces  extendiéndola,  se  unta  de  mantequilla  y  se 


64 

doblará;  y  así  se  estará  untando,  doblando  7  extendiendo 
hasta  que  se  fe  hayan  untado  veinte  onzas  de  mantequilla, 
y  en  todo  lo  demás  se  hará  como  loe  anteriores. 

1.513.  Otra  masa  para  pasteles. — En  libra  y  media  de  ha- 
rina se  echarán  dos  onzas  de  azúcar  molida»  una  yema  de 
huevo,  una  onza  de  aceite  bueno,  otra  de  manteca,  azafrán 
molido  á  darle  color,  j  agregándole  la  agua  necesaria,  se  ha- 
rá la  masa  y  pasteles  como  los  anteriores,  y  si  se  quieren 
embetunar,  se  hará  el  betún  con  una  libra  de  azúcar  cer- 
nida, tres  claras  de  huevo  bien  batido,  el  zumo  de  medio 
limón,  é  incorporado  todo,  se  untará  con  unas  plumas  antes 
de  entrar  al  horno,  y  después  de  cocidos,  si  se  quiere,  se  lee 
echa  una  poca  de  grajea,  y  vuelven  al  horno  un  corto  rato. 

1.514.  Relleno  de  polios  para  pastel. — Se  cortan  los  pollos 
en  pedacitosy  se  les  van  quitando  los  huesos;  la  carne  se 
pone  á  freir  juntamente  con  cebolla  y  perejil  pi endito,  se 
dora  un  poco  de  harina  en  mantequilla  y  se  agrega  á  los  po- 
llos y  casi  á  la  hora  antes  de  comerlos  se  les  echa  unas  ye- 
mas de  huevo  en  un  poquito  de  vinagre  y  revueltos  con  e 
guisado.  Se  puede  adornar  con  aceitunas  deshuesadas. 

1.515.  Pastelón  de  vino.   (*) — Con  media  libra  de  harim 

(*)  De  las  masas  de  pasteles  después  de  bien  beneficia 
das,  p  1  tendidas  algo  gruesas  sobre  polvo  de  harina,  se  cor 
tan  con  moldes  de  hoja  de  lata  untada  de  manteca  6  roante 
quilla,  según  de  lo  que  esté  untada  la  masa,  y  éstos  serát 
unos  redondos  de  un  tamaño  regular,  otros  triangulados 
ovalados  y  otros  haciendo  figura  de  empanada,  6  cuadrados 
ó  redonditos  chiquitos  menos  que  una  peseta,  y  todos  ten 
drán  caja  cuanto  á  que  no  aplasten  la  masa  al  cortarlos,  ; 
para  meterlos  al  horno  se  untan  con  una  pluma,  unos  de  al 
míbar  baja  de  punto,  y  otros  de  manteca  6  mantequilla  de 
rrotida.    Estos  no  van  rellenos,  y  solo  quedan  esponjado! 


85 

floreada,  se  hará  un  cerco  en  una  mesa,  y  allí  se  echarán 
tres  yemas  de  huevo,  azúcar  cernida  cosa  que  le  salga,  una 
poca  de  manteca,  derretida  y  fría,  vino  generoso  el  que  sea 
preciso  á  mojar  la  masa,  la  que  ha  de  quedar  tierna,  y  ya 
que  esté  se  extenderá  con  el  palote,  y  se  cortarán  unas  tor- 
tillas muy  delgadas  del  tamaño  del  platón  6  tortera  en  que 
se  haya  de  hacer,  ya  untado  de  manteca  se  pondrán  por  fon- 
do tres  6  cuatro  de  estas  también  untadas,  y  por  relleno  se- 
rá una  pasta  hecha  fuera  de  lumbre,  con  almíbar  subido  de 
punto,  vino  generoso,  clavo  y  canela  en  polvo,  mamón  mo- 
lido, pasas,  almendras,  nueces,  piñones  y  ajonjolí  tostado 
y  ya  sazonada  y  algo  espesa,  se  pondrá  sobre  las  tortillas  y 
quedará  según  el  gusto,  plano  6  elevado,  y  se  claveteará  con 
mas  pasas,  almendras,  nueces,  piñones  y  trocitos  de  calaba- 
zate ó  acitrón,  y  puestas  encima  otras  dos  ó  tres  tortillas 
también  muy  delgadas,  se  repulgará  al  bordo  del  platón  ó* 
tortera,  y  se  adorna  con  figuras  y  labores  hechas  de  lá  mis- 
ma masa,  se  untará  con  unas  plumas  de  suficiente  manteca, 
se  mete  al  horno,  de  buen  temple,  y  así  que  esté*,  se  le  echa 
antes  que  enfrie  azúcar  cernida  6  grajea  sobre  las  labores 
que  tenga  en  el  lado  de  arriba. 

Agregándole  al  relleno  tuétanos  cocidos,  saca  otro  gusto. 

1,516.  Masa  para  cubrir  un  pastel. — Una  libra  de  harina 
se  amasa  con  cuatro  huevos  enteros,  cuatro  onzas  de  man- 
teca y  cinco  onzas  de  azúcar.  Dichos  ingredientes  se  ama- 
san con  todos  los  dedos  sin  agregarle  agua;  hecho  esto  se 
extiende  con  un  palote  en  un  tablero  dejándole  un  poco 
mas  grueso  que  el  de  un  peso;  así  extendida,  se  unta  el  in- 
terior de  una  cacerola  con  manteca,  y  de  esta  se  cubre  bies 
la  dicha  cacerola  que  se  rellena  con  los  ingredientes  que  s< 


86 

expresan  adelante,  cubriéndola  después  de  rellena  con  uña 
capa  de  la  misma  masa. 

1,517.  BdUno  para  «n  poste!. — Con  anticipación  se  ten- 
drá ya  nn  pollo  bien  guisado  con  recaudo,  deshuesado  y  he- 
cho pedaoitos  pequeños:  á  mas  de  esto  se  tendrán  ya  guisa- 
das cuatro  6  cinco  docenas  de  albóndigas  del  tamaño  do  una 
bala  de  á  onsa,  las  que  se  disponen  y  guisan  como  las  cor- 
rientes; y  por  último,  se  tiene  ya  prevenido  un  buen  caldo  de 
estofado  6  mechado  que  deberá  estar  bien  espeso,  colorado 
y  de  bastante  sustancia.  Luego  que  este*  todo  listo  se  cuece 
en  agua  con  suficiente  sal  para  que  no  quede  desabrida,  la 
la  cantidad  proporcionada  al  tamaño  de  la  cacerola  en  que  se 
está  haciendo,  de  macarrones  6  fideos  gordos  que-  no  han  de 
cocerse  mucho;  se  sacan  de  la  agua  escurriéndolos  por  un 
colador,  y  se  van  oolocando  en  la  cacerola,  que  cómo  Ya 
dicho  se  tendrá  preparada,  poniendo  unos  pocos  de  fideos 
con  queso  de  Flandee  rallado,  una  cantidad  de  albóndigas, 
otra  del  pollo  guisado,  un  polvo  de  canela  y  un  poco  del  cal- 
do del  estofado.  Asi  se  van  oolocando  los  ingredientes  has- 
ta rellenar  la  cacerola  á  la  que  se  le  pone  la.  tapa  de  masa 
ya  dicha  ajustándola  con  la  de  abajo  á  fin  de  que  quede 
bien  cerrado  el  pastel;  á  la  superficie  de  la  tapa  se  le  unta 
con  plumas  una  poca  de  yema  de  huevo  batido;  se  le  des- 
polvorea asacar  por  encima.  Así  como  está  se  pone  en  el 
horno  muy  fuerte,  y  ya  casi  cocido,  lo  que  so  advertirá  por 
la  masa  que  cubre  el  relleno  del  pastel,  se  enfría  nn  poco 
volteándolo  en  un  platón  redondo  para  servirlo. 

1,518;  Paiid.de  yemaa  cocidas. — A  una  libra  de  harina, 
ocho  yemas  cocidas,  la  sal  y  azúcar  al  gusto;  esto -se  amasa 
con  manteca  derretida  hasta  que  no  se  pegue  en  las  manos; 


87 

« 

te  extiende  en  una  cazuela  embarrada  de  mantequilla  y  se 
pone  á  cocer  tapando  la  cazuela  con  un  comal  con  lumbre 
encima.  Hecho  esto  se  le  pone  el  picadillo  que  se  quiera, 
se  ¿ubre  con  la  masa  y  pone  á  dos  fuegos. 

1,519.  Otro  de  yemas  y  maíz. — Se  lava  el  maíz  y  se  des- 
punta; se  pone  al  sol  á  que  seque,  se  muele  y  se  tamiza  por 
un  ayate;  se  muele  azúcar  y  á  poco  menos  de  medio  almud 
de  maíz,  seis  yemas  de  huevo  cocidas  y  molidas,  se  echan  á 
esta  masa  con  mantequilla  derretida.  Se  hace  como  el  an- 
terior poniéndolo  en  una  cazuela  embarrada  de  mantequilla 
y.  todo  lo  demás  que  se  dijo.  £1  relleno  al  gusto. 

1,6230.  Tostel  de  garbanzo. — Después  de  cocido  se  despe- 
lleja y  muele;  se  le  echa  sal  y  manteca  derretida, se  rellena 
con  acelgas  sazonadas  con  cebolla,  ajo  y  jitomate  ya  frito, 
se  le  eoha  aceite,  queso  rallado,  yemas  de  huero  y  una 
clara. 

1.521.  Pastel  de  pifión. — Se  muele  una  libra  de  pifión  re- 
mojado en  leche  y  al  molerlo  se  le  sigue  echando,  luego  se 
deshace  todo  en  leche,  como  en  dos  cuartillos,  se  baten  seis 
huevos  y  se  incorporan  con  la  leche,  mezclando  bien,  se  le 
añaden  seis  onzas  de  azúcar  y  un  poco  de  sal,  se  cortan  los 
cubiletes  un  poco  anchos,  sé  untan  de  manteca  y  se  va  po- 
niendo, se  pican  con  el  cuchillo  para  que  no  se  hagan  veji- 
gas y  se  mandan  al  horno.  ' 

1.522.  Pastel  de  leche  y  huevos  hilados.  — Se  da  medio  pun- 
to á  tres  libras  de  azúcar,  se  hilan  en  ella  doce  yemas  de 
huevo  batidas  y  pasadas  por  pichancha,  se  cuecen  seis  cuar- 
tillos de  leche  para  revolver  el  huevo  y  unos  piñones  molí- 
dos,  se  amasa  y  se  mezcla  con  doce  huevos  batidos  y  se  po- 
nen en  una  sartén  entre  dos  fuegos  con  manteca  para  que 


88 

ouaje.  Esto  4»  puede  hacer  un  día  antes  del  en  que  ae  quie» 
ra  comer.  " 

1,623.  Pastel  de  mata  fina. — Se  cojen  dos  libras  de  hari- 
na, se  le  echan  catorce  yemas  de  huevo,  una  libra  de  man- 
tequilla y  esta  se  va  echando  á  poquitos,  con  media  libra 
de  azúcar  molida.  Se  amasa  todo,  y  el  punto  de  la  masa  ha 
de  ser  de  perla,  se  extiende  un  poco  de  masa  en  el  plafón 
como  si  se  quisieran  hacer  tortillas  y  después  se  echa  le  ma- 
sa que  se  envuelve.  Antes  se  separa  un  poco  de  la  misma 
masa,  se  hacen  unas  tiras  largas  y  con  ellas  se  forma  al  re- 
dedor del  envoltorio  unas  trencitas  que  sirven  de  adorno. 

1.524.  Pastelón  de  requesón.  —Batido  el  requesón  de  yaca 
conAyemas  de  huevo  á  darle  color,  y  azúcar  y  canela  molida 
al  gusto,  piñones,  pasas,  almendras  y  nueces  partidas,  con 
esto  será  el  relleno  del  pastelón,  que  en  todo  se  hará  como 
el  paatelon.de  almendras, 'piñón es  y  natillas. 

1.525.  Masa  para  empanadas  ó  pasteles. — Se  toman  cinco 
cuarterones  de  manteca  6  mantequilla  buena  para  una  cuar- 
tilla de  harina,  y  uña  onza  de  sal.  Estas  dosis  servirán  de 
regla  para  hacer  mas  ó  menos  cantidad  de  masa. 

Se  pone  la  harina  sobre  un  tablero  muy  limpio,  se  hace 
un  hueco  en  el  medio  de  la  harina  para  poner  la  manteca  en 
▼arias  porciones  y  la  sal.  Se  echa  agua  á  discreción  y  con 
prudencia,  pues  si  se  echase  demasiada  la  masa  seria  muy 
blanda  y  no  tendría  consistencia;  se  une  lo  mejor  que  se 
pueda  la  manteca  con  el  agua,  y  poco  á  poco  se  va  mezclan* 
oo  con  la  harina. 

Luego  que  la  harina  ha  embebido  todo  el  agua,  se  ama- 
sará bien  á  fuerza  de  brazo,  no  importa  que  esta  masa  esté 
muy  espesa  con  tal  de  que  este*  .bien  Jigosa  y  que  no  con- 


89 

tenga  grumos.  Se  tendrá  cuidado  de  hacer  esta  masa  lo  me- 
nos  dos  horas  antes  de  usarse  para  que  no  tenga  tiempo  de 
reposar  y  de  crecer. 

Con  esta  masa  se  hace  toda  clase  de  empanadas,  como  de 
ternera,  de  conejos,  de  liebres,  de  aves  y  de  peces. 

Las  empanadas  de  aves  se  disponen  de  diversos  modos; 
si  son  de  gallina,  se  corta  la  ave  en  cuatro  cuartos;  si  de  pi- 
chones, sé  cortan  en  dos  mitades;  si  de  palominos,  se  coló* 
can  enteros  á  menos  que  no  sean  grandes,  pues  entonces  se 
parten  también  en  dos;  y  si  de  alones  de  pavo  se  colocan 
enteros,  etc. 

Para  hacer  las  empanadas  se  toma  primero  la  cantidad  de 
,  masa  que  baste  para  dejarlas  del  tamaño  que  se  quiera;  se 
pasa  por  esta  masa  un  rodillo  de  palo  para  aplanarla,  y  se 
pone  en  una  tortera;  encima  de  esta  masa  se  coloca  la  car- 
ne que  se  haya  preparado  con  sal  y  pimienta,  y  en  todos  los 
huecos  se  añade  buena  mantequilla;  se  cubre  la  carne  con 
tiras  anchas  y  delgadas  de  tocino,  que  en  el  arte  se  llaman 
albardas;  se  tapa  todo  con  una  cubierta  de  masa  pasada  con 
un  rodillo  del  mismo  grueso  que  la  que  ha  servido  de  asien- 
to á  la  empanada,  se  baja  un  poco  por  su  circunferencia  pa- 
ra juntar  los  bordes  de  la  mana  superior  con  la  inferior;  sé 
humedecen  estos  bordes  con  un  poco  de  agua  para  que  se 
peguen  bien,  al  propio  efecto  se  aprieta  el  superior  sobre 
el  inferior  con  una  fuerza  conveniente,  y  se  concluye  ha- 
ciendo un  borde  algo  levantado  con  el  dedo  pulgar,  todo  al 
rededor  de  la  masa.  Se  toma  un  huevo,  se  bate  bien  su  ye- 
ma y  su  clara,  y  con  una  pluma  se  unta  toda  la  superficie 
superior  de  la  empanada. 

Se  cuece  en  el  horno  por  tres  horas,  un  cuarto  de  hora 


90 

después  que  1*  empanada  esté*  en  el  horno,  te  saca,  te  le  ha- 
oe  un  agujero  en  medio  para  que  salga  el  vapor  que  ae  for- 
ma en  su  interior,  que  le  haría  acuosa  y  de  mal  gusto,  y  ae 
vuelve  6  meter  otra  vez  en  el  horno. 

Luego  que  han  paaado  las  tres  horas,  te  saca  del  horno, 
ae  levanta  la  capa  de  encima  con'  mucha  destresa  cerca  de 
su  borde,  ae  le  quita  la  grasa  superabundante  que  tenga 
dentro,  se  apartan  las  albardas  de  tocino,  y  con  uña  cucha- 
ra se  separa  aquella  porción  de  masa  exuda  que  esté*  en  la 
parte  interior  del  mismo  borde. 

Se  tiene  preparada  en  una  cazuela  alguna  salsa  de  buen 
gusto,  y  se  echa  dentro  de  la  empanada,  se  vuelve  á  cubrir 
ésta  con  su  tapa  de  masa,  y  se  sirve  á  la  mesa. 

Este  método  es  general  sin  variación  alguna  para  hacer 
todas  las  empanadas,  no  habiendo  entre  ellas  mas  diferen- 
cia que  la  del  condimento  de  carnes,  aves  6  pescados  que 
se  les  ponga  dentro,  pues  la  masa  y  el  modo  material  de  dis- 
poner astas,  es  siempre  el  mismo. 

Es  muy  especial  advertir  que  las  carnes  6  aves  que  hayan 
de  servir  para,  llenar  las  empanadas,  no  se  han  de  cocer  al 
punto  de  que  pierdan  todos  sus  jugos  agradables,  .como  se 
hace  regularmente.  Basta  escaldarlas  en  agua  hirviendo, 
darles  un  solo  hervor  y  meterlas  inmediatamente  en  agua 
fresca.  Después  de  esta  operación  se  colocan  en  la  empana- 
da como  queda  dicho;  pues  el  resto  de  su  cocción  se  ha  de 
hacer  en  el  horno.  Por  no  hacerlo  así,  son  tan  malas  las 
empanadas  que  venden  la  mayor  parte  de  loe  pasteleros,  y 
pierden  su  crédito  la  mayor  parte  de  nuestras  cocineras. 

1,526.  Empanadas. — A  una  libra  de  manteca  derretida  y 
fría,  se  le  echará  un  pocilio  de  agua  con  sal,  un  cuarto  de 


91 

cuartillo  de  vino  generoso,  una  poca  de  levadura  disuelta 
con  la  agua  de  sal  y  se  batirá  todo  esto  hasta  que  se  haya 
incorporado,  y  entonces  se  le  irá  echando  harina,  y  mez- 
clándola de  modo  que  quede  la  masa  suave  y  que  se  pueda 
extender,  y  en  una  cazuela  untada  de  manteca  se  pondrá  y 
se  tapa;  si  la  masa  se  hace  en  la  mañana  las  empanadas  se 
harán  en  la  tarde;  y  si  se  hace  por  la  tarde,  se  harán  al  dia. 
siguiente  por  la  mañana;  entonces  se  extenderán  con  él  pa- 
lote sobre  polvo  de  harina,  se  cortarán  del  tamaño  que  se 
quiera,  se  rellenarán  de  picadillo,  agregándole  troátós  de 
jamón  y  huevo  cocido,  aceitunas  y  tornachiles  en  cuartos,  y 
si  fuere  de  pescado,  éste  se  dispondrá  friendo  en  manteca 
cebollas,  ajos,  jitomates  y  chile  verde  picado,  y  estando  fri- 
to se  le  echa  una  poca  do  agua  no  siendo  bagre,  y  se  le  agre- 
gará sal,  los  trozos  del  pescado  ya  cocidos,  y  proporcionados 
á  las  empanadas,  azafrán,  clavos  y  pimienta  molida,  pere- 
jil picado,  aceite  y  vinagre,  y  hervirá  hasta  quedar  consu- 
mido, y  en  cada  una  se  pondrá  un  poquito  del  recaudo,  un 
trocito  del  pescado,  unas  alcaparras,  aceitunas  y  chilitos 
partidos,  si  fueren  chicas,  y  si  fueren  grandes  serán  torna- 
chiles en  cuartos  6  chilitos  enteros;  se  doblan  y  se  les  ha- 
rá repulgo  á  la  orilla,  y  puestas  en  hojas  de  lata,  se  mete- 
rán al  horno,  que  esté  de  buen  temple,  y  cuando  se  hayan 
cocido  y  se  sequen,  se  les  echará  azúcar  cernida. 

1,527.  Otra* — En  una  libra  de  harina  floreada  se  le  echa- 
rán  tres  yemas  de  huevo,  una  onza  de  manteca,  tres  cuar- 
tas partes  de  un  pocilio  poblano  de  aceite  bueno  y  agua  la 
necesaria;  se  amansará  y  estando  ya  suave  y  consistente,  se 
extenderá  la  masa  con  el  palote,  se  cortan  del  tamaño  que 
se  quiera,  y  en  lo  demás  se  harán  como  la»  anteriores. 


92 

1.528.  Otras. — Se  pondrán  do*  cerco»  de  harina- de  á  li- 
bra cada  uno.  y  en  uno  te  echarán  tres  huevos,  una  poca 
de  azúcar  cernida,  tal,  un  poco  de  tequesquite  y  la  agua 
necesaria  para  juntarla;  la  otra  se  juntará  con  solo  manteca 
derretida  y  fría,  y  después  juntando  las  dos  se  amasarán  y 
se  les  irá  agregando  manteca  hasta  que  esté*  suave,  manua- 
ble, y  que  se  pueda  extender  con  el  palote,  y  estando  ex- 
tendida de  un  grueso  regular  se  cortarán  con  el  cuchillo  del 
tamaño  que  se  quieran,  y  se  concluirán  como  las  anterio- 
res, rellenas  de  carne  6  pescado,  y  se  les  pondrá  enrejados 
de  la  misma  carne. 

1.529.  Otras. — A  una  libra  de  harina  se  le  echará  una 
poca  de  azúcar  molida,  un  polvo  de  tequesquite,  manteca  y 
aceite,  una  poca  de  levadura  disuelta  en  la  agua,  que  se  le 
agregará  para  juntarla  y  amasarla;  y  cuando  ya  este'  en  dia* 
posición  se  harán  como  las  demás. 

1,690.  Empanada»  de  chuleta*  de  carnero  á  la  perigord. — 
Se  toma  un  lomo  de  carnero,  se  cortan  pequeñas  las  chulé- 
tas  sin  dejarles  mas  hueso  de  la  costilla  que  el  necesario  pa- 
ra que  se  conozcan;  se  guarnece  la  tortera  con  la  masa  dis- 
puesta como  se  ha  dicho  en  el  artículo  anterior;  se  colocan 
encima  las  costillas;  se  toman  unas  criadillas  de  tierra  pela- 
das; se  colocan  entre  las  chuletas,  y  se  expolvorea  todo  por 
encima  con  un  poco  de  sal  molida  mezclada  con  pimienta  y 
clavo  también  molidos;  se  ponen  sobre  las  chuletas  y  cria- 
dillas albardas  de  tocino  gordo,  y  todo  se  cubre  con  mante- 
quilla del  grueso  de  un  canto  de  real  de  plata,  y  se  conclu- 
ye la  empanada  como  se  lia  prescrito. 

Se  cuece  por  espacio  de  tres  horas  en  la  propia  forma. 

Después  de  cocida,  y  levantada  la  tapa  de  la  masa,  qui- 


03 

tando  el  tocino,  la  manteca  superabundante  y  la  maaa  cru- 
da interior,  se  echa  en  las  costillas  una  buena  sustancia  de 
carnes,  sazonadas  según  el  gusto  de  cada  uno,  mozclada  con 
medio  cuartillo  de  vino  blanco,  el  mejor  que  se  encuentre. 
Si  no  hay  criadillas  de  tierra,  entonces  se  hace  la  empa- 
nada con 'las  chuletas  *ola%  y  se  omite  el  vino  blanco  en  la 
salsa. 

1.531.  Empanadas  de  conejos  y  liebres. — £1  conejo  se  cor- 
ta en  cuartos  y  aun  en  porciones  mas  menudas,  y  se  le  que- 
brantan un  poco  los  huesos  con  el  revés  del  machete  6  cu- 
chillo de  cocina. 

Se  escalda,  se  le  da  un  hervor,  y  se  mete  en  agua  fresca 
antes  de  colocarlo  en  la  empanada. 

A  la  liebre  se  le  quitan  todos  los  huesos,  para  no  poner 
mas  que  la  carne  ,  y  se  procede  del  mismo  modo:  los  huesos 
pueden  servir  para  hacer  un  guisado,  porque  se  quedan  siem- 
pre con  alguna  carne  pegada. 

1.532.  Empanadas  de  codornices. — Se  procede  en  todo  co- 
mo queda  dicho  en  el  primer  artículo,  con  la  prevención  de 
que  cada  codorniz  se  partirá  en  cuartos,  y  los  menudillos  se 
picarán  con  tocino  y  se  colocarán  en  el  centro  de  la  em- 
panada. 

1.533.  Empanadas  d$  huevo. — Hecha  masa  como  la  de  los 
gaznates  y  un  poco  mas  cargada  de  harina/»  pero  que  no  que- 
de reseca,  se  extenderá  con  el  palote  sobre  polvo  de  harina, 
arriba  y  abajo;  se  cortarán  las  ruedas  con  un  plato,  según 
el  tamaño  que  se  quiera,  y  en  la  mitad  de  cada  una  se  pon  - 
drá  arroz  oonjeche  como  es  corriente  hacerlo,  se  dobla  la 
otra  mitad  y  se  repulga;  se  tiene  ya  azúcar  medio  molida  y 

LA  COCINERA  POBLANA.  — TOM.  IL — 7. 


94 

en  ella  se  voltean  á  que  la  cojan  y  te  Tan  poniendo  en  ho- 
jas de  lata,  y  se  meten  al  horno  de  buen  temple. 

1.534.  Otro*. — Puestos  en  una  cazuela  diez  y  nueve  hue- 
ros y  tres  tasas  calderas  de  manteca  derretida  y  fría,  una 
libra  de  asacar'  molida,  una  poca  de  agua  de  azahar,  se  le 
irá  mesclando  harina  floreada  hasta  hacerse  una  masa  ma- 
nuable, y  puesta  sobre  harina  en  una  mesa  se  soba  hasta 
que  esté*  enoerada,  y  entonces  se  extiende  con  el  palote,  se 
cortan  como  las  anteriores,  se  rellenan  de  alguna  leche,  agre- 
gándoles pasas,  pifiones,  almendras  y  nueces  partidas;  se  do- 
blan y  concluyen  como  las  anteriores,  echándoles  asacar  6 
ajonjolí  crudo. 

1.535.  Otros.  — Esta  se  hará  con  una  libra  de  harina  pues- 
ta en  una  mesa,  se  le  echa  sal,  cinco  yemas  de  huero,  vino, 
una  poca  de  manteca,  asacar  cernida,  á  darle  muy  poco  dul- 
ce, y  agua  necesaria  para  que  se  pueda  juntar,  se  amasará 
bien,  y  extendida  con  el  palote  se  untará  de  manteca  y  se 
volverá  á  doblar,  esto  se  hará  por  cinco  6  seis  ocasiones,  y 
extendida  por  último,  se  cortarán  cuadradas,  6  como  es  co- 
rriente, se  rellenan  de  alguna  pasta  6  leche  espesa,  y  pues- 
ta la  capa  de  encima,  se  unirá  bien  no  de  la  orilla  sino  co- 
mo al  través  de  un  dedo  adentro,  cosa  que  despeguen  el 
ojaldre  al  rededor;  encima  se  les  pondrá  alguna  figura  de  la 
misma  masa,  y  puesta  en  papeles  y  hojas  de  látase  meterán 
al  horno  y  cuando  salgan  se  les  echará  asacar  cernida  por 
encima. 

1.536.  Empernadas  fritas. — labra  y  media  de  harina  flo- 
reada se  juntará  con  media.  libra  de  harina  derretida  y  fría, 
agua  de  sal,  tequezquite  asentado,  para  suavizarla,  y  así  que 
ya  está  encerada  y  manuable,  se  tontera  la  inam  de  cade  una 


del  tamaño  que  se  quieran  hacer,  se  extenderá  con  el  palo- 
te y  se  rellenarán  de  picadillo,  y  doblándolas  se  repulgan  de 
la  orilla  y  se  freirán  en  manteca;  al  sacarlas  se  les  echa  azú- 
car molida. 

1,587:  Empanadas  de  leche.  — A  dos  libras  de  harina  florea- 
da, media  taza  de  mantequilla  derretida  y  fría,  otra  de  man- 
teca lo  mismo,  seis  yemas  de  huevo,  medio  pocilio  de  agua 
de  anís,  otro  medio  de  agua  de  tequesquite  asentado,  una 
poca  de  sal  y  leché,  la  necesaria  para  que  se  junte  y  amase 
bien  hasta  levantar  ampollas:  si  se  resecare  se  suavizará  con 
mas  leche,  y  ya  que  esté  se  extiende  con  el  palote  y  se  re- 
llenarán de  pasta  de  almendras,  hecha  con  una  libra  de  al- 
mendra molida  y  otra  de  azúcar  cernida  y  mezclada  6  con 
conserva  de  coco,  6  alguna  leche  espesa;  se  doblarán,  se  les 
repulga  la  orilla  y  se  freirán  en  manteca;  al  sacarlas  se  les 
echará  azúcar  y  canela  en  polvo. 

Estas  corrientemente  se  hacen  chiquitas. 

1.538.  Empanadas  dt  vino. — En  estas  será  la  masa  como 
la  anterior,  con  la  diferencia  de  que  en  lugar  de  la  leche  se- 
rá vino,  y  el  relleno  será  de  pasta  de  almendras  remojadas, 
molidas  y  revueltas  con  azúcar  cernida,  tanto  de  una  como 
de  otra,  agua  de  azahar  y  en  lo  demás  se  harán  lo  mismo. 

1.539.  Otras. — A  una  libra  de  harina  se  le  echarán  cua- 
tro yemas  de  huevo,  una  poca  de  agua  con  sal,  un  polvo  de 
tequesquite  y  manteca  la  necesaria  á  suavizarla;  se  amasará 
y  se  deja  un  rato  tapada,  y  después  se  extenderá  con  el  pa- 
lote, se  cortarán  las  masas  del  tamaño  que  se  quieran  hacer 
(que  son  mejores  chicas)  se  untan  de  manteca,  y  se  volve- 
rán á  hacer  bolita,  y  vueltas  á  extender  cada  una,  se  con- 
cluirán como  las  anteriores. 


96 

1,540.  Budin  ingtés. — Se  toman  dos  libras  de  tuétano  de 
Taca,  y  ai  no  lo  hay,  doa  libras  de  greta  de  ríñones  de  vaca. 
Se  le  quita  el  pellejo  y  los  nervios,  se  corta  en  pedacitos  pe* 
queños  y  se  pone  en  una  cazuela  grande.  Se  quitan  los  hue- 
sos á  libra  y  media  de  pasas,  y  se  mezclan  con  el  tuétano  6 
grasa,  se  añaden  tres  libras  de  migaja  de  pan  pasadas  por 
la  pasadera;  un  vaso  de  tino  de  Málaga,  dos  vasitos  de  aguar- 
diente de  Cognac,  la  corteza  de  medio  limón  picada  muy 
menudo,  un  puñado  de  acitrón  confitado,  cortado  en  peda- 
citos, un  puñado  de  harina,  la  sal  suficiente  y  ocho  hueros 
enteros.  Se  humedece  el  todo  con  leche,  se  amasa  con  las 
manos  para  que  se  mezcle  bien  y  se  forma  una  pasta  algo 
líquida,  se  pone  á  cocer  en  una  olla  qne  sea  capaz,  de  reci- 
bir el  budin.  Guando  hierva  se  toma  un  trapo  grande,  se 
le  pone  harina  y  se  coloca  en  una  pasadera  que  ha  de  servir 
dé  molde,  se  colocan  todos  los  ingredientes,  se  amarran  las 
puntas  sin  que  quedo  muy  estrecho  el  budin  y  se  coloca  en 
el  agua  que  debe  es^ar  hirviendo;  se  retira  primeramente 
al  borde  de  la  hornilla,  y  obsérvese  que  el  agua  solo  debe 
cubrir  la  mitad  del  budin,  y  que  para  mantener  el  hervor 
es  necesario  tener  á  la  mano  agua  hirviendo,  porque  sin  es- 
tas precauciones  penetrará  el  agua  en  el  budin.  Se  deja  co- 
cer seis  6  siete  hora*  y  se  voltea  cada  hora;  mientras  se  cue- 
ce, se  hace  la  salsa  siguiente: 

Se  pone  en  una  cacerola  un  cuarterón  de  mantequilla,  un 
poco  de  harina,  un  poco  de  cascara  de  limón,  sal  y  una  cu- 
charada de  azúcar  en  polvo. .  Se  humedece  con  vino  de  Má- 
laga, se  hace  cocer  como  cualquiera  otra  salsa.  En  el  mo- 
mento de  serviría,  se  enjuga  el- budin,  se  le  quita  el  trapo 
y  se  coloca  en  un  plato  echándole  encima  la  salsa. 


97 

El  budín  se  puede  cocer  también  el  horno  poniéndolo 
en  una  cacerola  embarrada  de  manteca. 

1,541.  Budín  de  carne. — Se  coje  un  lomo  de  ternera  y  un 
trozo  de  carne  de  puerco,  y  después  de  limpiar  bien  ambas 
cosas,  se  pican  y  muelen,  se  echa  el  conjunto  en  una  cazue- 
la y  se  le  revuelve  una  torta  de  pan  remojado,  la  sal  sufi- 
ciente, pimienta  gorda  y  delgada,  cebolla  picada  y  sanco- 
chada con  mantequilla,  medio  de  jamón  gordo  muy  picado, 
un  poco  de  tuétano  derretido  y  alcaparras,  ocho  yemas  de 
huevo,  cuatro  claras,  cuatro  onsas  de  manteca  frita  y  otras 
cuatro  de  mantequilla  derretida  en  la  manteca.  Se  revuelve 
todo  muy  bien,  se  baten  otras  cuatro  claras  de  huevo  y  se 
echan  á  la  carne  mezclándolo  bien;  se  embarra  un  molde 
de  manteca,  se  le  echa  un  polvo  de  pan,  se  vacia  allí  la  pas- 
ta y  se  pone  á  cocer  por  espacio  de  tres  horas  en  un  cazo, 
con  agua,  cuidando  que  ésta  no  penetre  en  el  molde,  del 
cual  se  saca  á  la  hora  de  comer,  pues  se  toma  caliente  con 
la  salsa  siguiente  que  se  pone  á  parte:   * 

Se  fríen  en  una  salsera  ocho  onzas  dé  mantequilla,  y  allí 
se  dora  una  cucharada  de  harina  y  se"  deslíe  con  un  poco  de 
caldo  de  la  olla,  pero  sin  chile,  procurando  que  quede  de  un 
espeso  regular;  se  le  echa  un  polvo  de  pimienta,  perejil  pi- 
cado, alcaparras  y  sal;  todo  se  deja  hervir  para  que  se  sazone. 

Este  budin  también  se  come  frío,  y  á  otro  dia  se  rebana 
el  que  quedó,  y  se  fríe.  Aseguramos  que  queda  muy  sabrosa 

1,543.  Budín  de  almendra. — A  una  libra  de  almendra 
diez  yetaas  de  huevo  y  cuatro  clavos,  todo  bien  batido,  ca- 
da cosa  por  separado.  Se  echa  allí  la  almendra  con  veinte 
al mend ritas  amargas,  todo  bien  molido,  media  libra  de  azú- 
car molida,  todo  esto  se  revuelve  y  se  está  batiendo  mas 


de  un  cuarto  de  hora.  Se  tiene  una  camela  untada  de  man* 
taquilla  con  un  polto  de  bizcocho,  ae  echa  allí  lo  batido  y 
ae  mete  al  horno,  que  este*  el  fuego  lento  y  ai  ae  quiere  que* ' 
mar  ae  le  pone  un  papel  por  encima;  para  saber  cuando  está 
cocida  ae  le  mete  un  popote  y  aaliendo  limpio  ya  está;  ae  va- 
cia y  ae  le  pone  azocar  por  encima. 

1,543.  Budiivde  almendras. — Se  muele  media  libra  de  al- 
mendras, no  ae  lea  echa  agua;  á  parte  ae  muelen  cuatro  on- 
zas de  azúcar  y  se  tamiza;  se  baten  doce  yemas  de  huero  y 
separadamente  se  baten  muy  bien  ocho  claras  que  se  revuel- 
ven con  las  yemas  y  la  almendra  después  de  batidas;  así 
que  la  almendra  se  desbarató  bien,  ae  le  echa  el  asacar,  se 
vuelve  á  batir  y  se  prueba;  si  se  quiere  mas  dulce  se  bate 
mucho  la  masa,  ae  unta  una  sartén  de  mantequilla  y  un  po- 
co de  bizcocho  de  velorio  y  no  se  llena  la  cazuela  porque  es- 
ponja; se  mete  el'  horno  y  cuando  se  dore  por  encima  ae  le 
pone  un  papel  para  que  no  se  queme.  Oon  un  popote  se  ve 
si  está  cocida;  cuando  está  el  popote  sale  limpio.  Le  sien- 
ta muy  bien  una  raspadura  de  naranja  por  encima.  . 
.  1,544  Budin  de  limón. — Se  baten  doce  llemas  de  huevo 
con  dos  claras  como  para  huevos  reales,  y  ya  que  este*  de 
esa  manera,  se.  le  echa  media  libra  de  almendra  no  muy  re- 
molida, mas  de  media  libra  de  azúcar  tamizada,  cuatro  ó  cin- 
co limones  rallados,  hasta  que  estando  todo  esto  bien  re- 
vuelto sepa  á  bastante  limón;  después  se  unta  la  budinera 
de  mantequilla,  y  encima  de  ella  se  echa  polvo  de  bizcocho 
suficiente  para  que  forme  costra;  y  esta  pasta  se  echa  en  la 
dicha  budinera,„se  le  quita  á  la  hornilla  la  lumbre,  y  allí 
se  coloca,  después  se  le  echan  trooitos  de  mantequilla  por 
encima,  y  se  le  pone  un  comal  con  lumbre;  para  que  está  4 


doe  fuegos,  y  paca  saber  cuando  está  cocido,  se  prueba  con 
un  popote,  que  cuando  se  mete  y  sale  limpio  y  «eco,  es  se- 
ñal de  que  ya  está» 

1,645.  Budin  de  bizcocho  de  velorio. — A  medio  cuartillo  de 
leche  se  le  echan  tres  tostadas;  tres  bizcochos  dé  velorio  y 
tres  mamones;  se  endulza  la  leche  al  gusto;  se  martajan  el 
bizcocho  y  el  mamón  y  se  echan  en  la  leche  con  seis  ti  ocho 
huevos;  medio' limón  rallado,  la  mitad  de  una  núes  mosca- 
da y  tres  ouebaradas  de  catalán:  se  embarra  la  budinera  de 
mantequilla  y  se  vacia  en  ella  la  pasta,  desmoronándole  por 
encima  las  tres  tostadas  y  se  pone  al  fuego. 

1.546.  Budin  dd  rey. — Media  libra  de  harina,  media  de 
azúcar  en  polvo,  media  de  mantequilla  en  trozo  y  cuatro 
huevos  sin  batir;  se  echa  todo  en  una  cazuela  y  se  bate  has- 
ta que  la  mantequilla  está  disuelta:  entonces  se  le  echan  dos 
onzas  de  almendra  en  cuarto  y  dos  onzas  de  pasas  de  Oorin- 
to,  se  revuelve  y  se  echa  en  la  budinera  que  estará  unta- 
da de  mantequilla  y  polvoreada  de  bizcocho  molido;  se  cue- 
ce á  dos  fuegos  lentos  como  todos  los  budines. 

1 .547 .  Budin  de  mamón*  — En  una  taza  de  leche  se  disuel- 
ven cinco  yemas,  azúcar  al  gusto  y  un  polvo  de  canela;  se 
unta  la  budinera  de  mantequilla  y  se  polvorea  con  bizcocho 
molido;  se  van  poniendo  capas  de  rebanadas  de  mamón  que 
se  bañan  con  esta  leche  hasta  que  se  llena  la  budinera;  se 
pone  á  cocer  y  no  se  vacia  hasta  que  esté  frío  para  que  no 
se  rompa. 

1.548.  Budin, — A  un  cuartillo  de  leche  cruda  se  desba- 
ratan dos  cajas  de  mamón  frías  medianas,  una  o*  dos  onzas 
de  mantequilla,  azúcar  al  gusto,  almendras,  acitrón,  piño- 
nes y  canela,  se  pone  á  cocer  todo  y  se  deja  enfriar,  se  le 


100 

echan  veinte  yemas,  I»  mitad  con  claras  y  la  mitad  sin  ella» 
batida*  alio;  se  unta  la  sartén  da  mantequilla  y  se  pone  á 
cuajar  entre  dos  fuegos;  ae  le  echa  por  encima-  asnear  y  ca- 
nela. 

1,549.  Budin  de  naranja, — En  una  taza  de  leche  ae  di- 
suelven cinco  yemas  do  huevo,  azúcar  al  guato  y  rin  polvo 
de  canela;  ae  prepara  la  budinera  con  la  mantequilla  y  el 
bizcocho  molido,  y  ae  van  poniendo  capa»  de  mamón  reba- 
nado y.  una  poca  de  esta  leche  hasta  que  se  llene  la  budine- 
ra; ae  pone  á  cocer  y  no  se  vacia  hasta  que  este*  bien  fría, 
porque  si  no  se  rompe. 

1.660.  Budin. — 8e  echa  á  remojar  en  leche  después  de 
bien  hervida  una  nxsanja  de  Ohina  rallada  con  el  rallo,  pa- 
sas, almendras  y  acitrón;  se  pica  todo  muy  menudo  y  se  re- 
vuelve con  bastante  asacar,  se  baten  seis  huevos  muy  bien 
y  se  unta  una  sartén  oon  mucha-  mantequilla,  se  calienta  la 
hornilla,  se  pone  la  sartén  echándole  mas  mantequilla  por 
encima  y  también  azocar  y  canela  en  polvo  y  un  comal  con 
rescoldo. 

1.661.  Otro  budin  dé  naranja. — Se  baten  cuatro  huevos 
como  para  freir  y  cuando  están  muy  altos  se  les  echan  seis 
cucharadas  de  bizcocho  duro,  media  cucharada  de  ralladura 
de  naranja  y  media  de  aguardiente  refino,  pasas  y  almendras 
picadas.  Se  muele  todo  y  se  pone  á  cocer  como  los  otros 
budines. 

1,652.  Plumpadin. — Se  ponen  en  una  cazuela  seis  onzas 
de  azúcar  y  seis  de  sebo  de  ternera  muy  picado,  media  libra 
de  pasas  sin  huesitos  picadas  y  media  libra  de  pasas  de  Co- 
rinto,  cuatro  onzas  de  pan  rallado,  cuatro  onzas  de  harina, 
cuatro  huevos,  un  poco  de  nuez  moscada,  sal,  de  tres  ácin- 


101 

co  limones  y  una  naranja,  cubiertos  y  picados.  Se  revuelve 
todo  con  leche  y  se  amarra  en  un  trapo  fuerte  y  mojado  en 
agua  fría  y  bien  expolvoreado  con  harina.  Se  pone  á  cocer 
en  agua  hirviendo  y  ha  de  estar  seis  horas  en  la  lumbre.  Se 
deja  enfriar  antes  de  quitarle  el  trapo. 

1,513.  Budin  de  joéchuga  de  bizcocho.  — Para  dos  pechugas, 
dos  cuartillos  de  leche;  se  hierre  esto  en  azúcar  y  canela  al 
gusto.  Se  le  echan  ocho  yemas  de  huevo  con  todo  y  clara  y 
se  les  revuelven  bien.  8e  unta  la  budinera  con  mantequilla 
y  se  ponen  en  el  fondo  pasas,  almendras  y  bizcochos  des* 
miga  jados,  luego  solo  bizcocho  y  después  pasas  y  almendras 
y  así  hasta  llenarla;  en  la  última  capa  solo  se  echan  pasas  y 
almendras  y  con  una  cuchara  se  va  echando  la  leche  á  que 
empape  bien ;  se  cuece  á  dos  fuegos. 

Para  este  budin  se  emplea  la  salsa  siguiente:  Se  derrite 
mantequilla  y  se  le  echa  harina  á  que  tome  color  de  trigo, 
azúcar  en  polvo  y  una  taza  de  vino  de  Jerez;  se  aparta  del 
fuego,  y  so  echa  de  esta  salsa  al  pié*  del  budin  y  también 
por  encima; 

1.654.  Budin  de  requeeon. — Se  baten  doce  yemas'  de  hue- 
vo y  se  le  echan  las  claras;  se  corta  en  rebanadas  delgadas 
libra  y  media  de 'requesón,  se  muele  cuartilla  de  bizcocho 
recortado  y  se  muele  todo  junto  con  el  huevo;  se  embarra 
una  sartén  6  budinera  con  bastante  mantequilla,  se  echa  el 
huevo  y  se  pone  4  dos  fuegos  para  que  cueza,  cuidando  que 
no  se  queme.  Se  hace  libra  y  media  de  almíbar  subida  de 
punto  y  en  ella  se  echa  la  torta.  Para  que  se  conserve  ha  de 
hervir  poco  y  en  fuego  lento.  Se  adorna  por  encima  con 
pasas,  piñones  y  almendras. 

1.655.  Budin  de  pan  de  birote. — En  un  cuartillo  de  leche 


103 

se  remojan  dos  tortas  do  pan  de  birote;  te  muele  oon  seis 
huero*  le  raspadura  de  un  limón  verde,  pasee  y  almendras; 
se  anta  el  molde  de  mantequilla,  se  le  echan  polvos  de  bis- 
cocho  duro,  se  amasa  la  pasta  y  se  cuece  á  dos  fuegos. 
Al  llevarlos  á  la  mesa  se  polvorea  oon  asacar. 

1.666.  Budín  de  bizcochos. — Se  cejen  dos  tortas  de  biséc- 
enos fríos  y  un  cuartillo  de  leche  muy  endulzada,  y  se  echan 
los  bizcochos  en  la  leche,  en  la  cual  se  desbaratan  con  la 
mano  dos  cucharadas  de  mantequilla,  pasas,  almendras  y  se 
le  agrega  acitrón  en  pedaeitos.  Antes  de  que  espese  la  leche 
con  todo  esto  se  hierve  y  después  se  echa  lo  dicho.  Se  em- 
barra una  tortera  de  mantequilla,  se  baten  cinco  huevos  co- 
mo para  torta  y  se  mezclan  con  la  leche  dejando  separado 
un  poco  de  huevo;  se  echa  luego  iodo  en  la  tortera  y  por  en- 
cima el  poco  huevo  que  se  apartó  y  se  pone  en  una  hornilla 
solamente  con  el  rescoldo,  y  en  la  tapadera  lumbre  muy 
fuerte  para  que  dore.  Se  le  mete  un  popote  y  cuando  sale 
limpio  ya  está  de  punto. 

1.667.  Budín  de  leche.— Cuezate  un  cuartillo  de  leche  oon 
su  azúcar  necesaria,  una  rajita  de  canela  y  un  poco  de* sal; 
échasele  medio  pan  desmenuzado; después  doblen  desleído 
añádanse  uñas  pasas  enteras,  almendras  tostadas,  un  poco 
de  limón  rallado,  una  rajita  de  canela,  dos  clavos,  seis  hue- 
vos batidos,  dos  cucharadas  de  mantequilla  y  medio  vaso 
de  vino  generoso.  Mézclese  todo  muy  bien,  úntese  el  mol- 
de oon  mantequilla,  échese  el  compuesto  dentro  y  se  coloca 
á  dos  fuegos  lentos.  Guando  esté'  cocido  se  vacia  en  un  pla- 
tón, echándole  por  encima  un  polvo  de  canela  y  azúcar  y  se 
clavetea  con  almendras  confitadas. 

1.668.  Budín  cubano, — Se  escojen  dos  cocos  que  están 


103 

bien  hechos;  ábranse  y  saqúese  1»  comida  qne  tienen  den- 
tro;  exprímanse,  echándoles  agua  de  modo  que  forme  una 
especie  de  leche.  Cuélese  y  agreguónsele  seis  huevos  bati- 
dos, taza  y  media  de  asacar  blanca,  dos  rajitas  de  canela 
molida,  tres  cucharadas  de  mantequilla  y  una  panetela;  há- 
gase una  masa  y  póngase  en  la  budinera  untándola  por  den- 
tro con  mantequilla  y  pan  rallado  para  evitar  se  pegue  la 
mosa;  échese  ésta  en  el  molde  y  póngase  á  oocer  entre  dos 
fuegos,  ó  si  se  quiere  en  el  horno.  Guando  se  cree  que  ha 
temado  consistencia  se  le  'expolvorea  con  canelo  y  asacar. 

1.559.  Budín  habanero. — Échense  los  mismos  ingredien- 
tes que  para  el  anterior  de  cocos,  se  hace  del  propio  modo, 
única  diferencia  de  que  en  lugar  de  la  leche  de  cocos,  se 
usa  el  zumo  de  pina  y  se  le  agrega  á  la  masa  medio  vaso 
de  vino  de  Málaga  ó  Moscatel. 

1.560.  Budín  dé  mamey  colorado. — Se  quitan  del  mamey 
los  filamentos  y  la  cascara;  amásese  la  pulpa  con  cuatro  hue- 
vos, panetela,  azúcar,  un  poco  de  sal,  clavillo,  especias,  ca- 
nela y  leche  necesaria;  fórmase  una  masita,  óchese  en  la  bu- 
dinera, untada  anteriormente  con  mantequilla  para  que  no 
se  pegue  el  budín;  se  cuece  y  después  se  expolvorea  con  azú- 
car y  canela. 

1.561.  Budín  de  mofa  teco. — Se  sancocha  con  agua  y  sal 
el  maíz;  después  se  machaca  bien  en  mortero,  se  escurre  en 
términos  de  que  no  le  quede  agua  alguna;  pásese  por  un  ta- 
miz para  quitarle  la  cascarita,  mézclese  jarro  y  medio  de 
leche,  dos  cucharadas  de  mantequilla,  dos  clavillos;  un  po- 
co de  canela  molida,  unas  raUaduritas  de  limón  y  nuez  mos- 
cada en  la  azúcoar  suficiente:  amásete  bien,  y  se  le  añaden 


104 

ocho  huero»  batidos,  una  cucharada  de  azahar  y  an  pooo  de 
anís;  te  pone  en  Ja  budinera  como  loe  demás  y  se  haoe  oooer. 

1.662.  Puding. — Tómense  tres  cuarterones  de  bizcochos, 
y  se  parten  en  pedacitos  que  se  empapan  en  crema,  se  po- 
nen á  cocer  con  leche,  echando  ésta  poco  á  pooo  á  medida 
que  se  vaya  espesando  el  pan,  y  coando  resalte  an  caldo  no 
muy  y  espeso  se  retira  del  fuego;  después  se  clarifican  seis 
onzas  de  tuétano  de  rao»  y  se  echa  en  la  cacerola,  anadien- 
do  ocho  onzas  de  azúcar  en  polvo,  con  mantequilla  fresca, 
algunas  pasas  y  vino  de  Malaga  y  cuatro  onsasde  macarro* 
nes  mechados. 

Toda  esta  mezcla  se  hace  hervir  doce  minutos,  revolvién- 
dola sin  cesar;  cuando  esté  en  punto  regular  se  deja  enfriar 
en  una  vasija  de  porcelana,  y  se  le  echan  después  ocho  ye- 
mas de  huevo  y  un  vaso  de  ron;  mézclese  todo  y  se  pone  en 
uu  molde,  y  se  cuece  como  una  torta  de  arroz,  pero  á  buen 
fuego. 

1.663.  Puding  de  pan— Se  hace  con  miga  de  pan,  hue- 
vos, leche  en  corta  cantidad  solo  psra  humedecerla,  un  pol- 
vo de  canela,  clavo  y  especias,  mantequilla,  y  póngase  en 
una  vasija,  que  debe  cocerse  á  gran  fuego. 

1664.  Empanadas  de  pescados. — Después  de  cocido  el  pes- 
cado se  le  quitan  huesos  y  espinas;  se  pone  en  ana  cazuela 
an  pooo  de  manteca  y  aceite,  unas  gotas  de  limón,  bastante 
jitomate,  cebolla  picada  y  ajos.  Se  pone  á  freir  echándole 
clavo,  'canela  y  pimienta.  Ya  que  está  frito  se  echa  el  pes- 
cado y  una  cucharada  del  caldo  en  que  se  coció,  se  deja  her- 
vir un  poco  y  se  aparta  para  que  se  enfrie.  Se  amasa  ana  li- 
bra de  harina  flor  con  agua  caliente  y  sal  deshecha  en  el  agua; 
se  echan  dos  huevos  crudos  y  un  poco  de  manteca  bien  ama- 


105 

tada,  se  envuelve  en  ana  servilleta  un  rato,  luego  se  extien- 
de con  empalóte  á  que  quede  no  muy  delgada,  se  echa  en  el 
centro  el  pescado  y  se  dobla  la  otra  masa  por  encima,  se  re- 
corta dándole  la  forma  de  empanada,  repulgando  la  orilla 
para  que  no  salga  el  caldo;  se  unta  una  tortera  con  mante- 
ca, se  pone  un  papel  mayor  que  la  empanada  y  ésta  se  colo- 
ca sobre  el  papel  y  se  ponen  á  dos  fuegos  violentos  para  que 
cuezan  pronto  y  la  masa  no  se  ponga  dura.  Ya  que  están  se 
polvorean  para  llevarlos  á  la  mesa  con  azúcar  6  ajonjolí. 

1,565.  Empanadas  de  carne — A  una  libra  de  harina  dos 
yemas  y  una  clara  de  huevo,  media  libra  de  manteca  y  agua 
fría.  Con  esto  se  hace  una  masa  suave  que  se  palotea  echán- 
dole mantequilla  derretida,  se  forman  las  empanadas  y  se 
rellenan  de  picadillo,  pescado  6  dulce  y  se  fríen.  Se  polvo- 
rea con  azúcar  antes  de  servirlas. 

1*566.  Empanadas  de  plátano. — Cocido  el  plátano  medio 
verde,  se  muele  en  seco  y  se  hacen  de  esta  masa  unas  torti- 
llas sobre  un  papel;  se  rellenan  de  picadillo  como  el  de  los 
chiles,  se  junta  el  papel  para  que  forme  una  empanada  y  se 
frien  después  las  papeles  en  manteca  á  que  queden  muy  do- 
rados. 

1,567.  Empanada»  de  San  Jerónimo.— Cuatro  yemas  de 
huevo  se  baten  en  una  batea  con  una  libra  de  azúcar  moli- 
da y  dos  de  manteca;  se  ponen  á  hervir  dos  tazas  de  agua 
con  un  granito  de  sal,  se  apea,  y  tibia  el  agua,  se  le  echa  la 
masa  y  se  sigue  batiendo  hasta  que  ya  no  se  pegue  en  la 
mano;  entonces  se  echan  tres  libras  de  harina  y  todo  junto 
se  amasa  muy  bien  para  palotearla.  Se  echa  zumo  de  na- 
ranja y  aceite. 

Se  cortan  las  ^empanadas  antes  de  echarles  el  picadillo 


106 

y  para  este  se  fríe  jitomate,  ajo  y  oebolla;  con  bastante 
manteca,  se  echa  un  poco  de  caldo  de  pescado,  chiles,  acei- 
tunas, alcaparras,  acitrón,  almendras  y  pasas;  después  se 
echa  el  pescado  quitadas  las  espinas,  se  rellenan  las  empa- 
nadas, se  doblan  y  se  ponen  al  horno.  Antes  de  echar  el 
picadillo  se  untan  con  manteca  fría  y  se  cortan  con  molde. 

1.668.  Empernada», — A  una  libra  de  harina  se  le  echan 
dos  yemas  de  huevo  y  se  amasa  muy  fuerte  para  que  quede 
suave  la  masa,  y  para  amasarla  se  le  echa  un  poco  de  agua 
tibia  con  sal;  cuando  está  bien  amasado  se  extiende  con  el 
palote  y  se  pone  un  poco  del  relleno  encima  de  la  masa;  co- 
mo cosa  de  una  cucharada  en  cada  empanada;  luego  se  do- 
bla la  masa  y  se  corta  oon  la  carretilla,  dándole  la  figura 
acostumbrada.  8e  pone  á  calentar  bastante  manteca  y  es- 
tando muy  caliente  se  echan  á  freír  las  empanadas  hasta 
que  se  doren  y  se  les  pone  el  siguiente  relleno: 

Se  pica  en  trozos  grandes  carne  de  ternera  y  de  puerco  y 
se  pone  á  cocer  con  sal.  Después  de  bien  cocida  se  pica  bien 
para  que  quede  muy  remolida  y  se  echa  á  freir  oon  un  poco 
de  jitomate,  cebolla  y  ajo,  que  ha  de  estar  bien  frito  antes 
de  echar  la  carne.  Guando  esté  á  medio  freir  se  le  echa  un 
poco  de  vinagre  y  se  deja  secar  hasta  que  la  carne  se  ponga 
muy  doroda. 

1.669.  Torta  de  calabazas. — Se  pica  la  calabaza  y  después 
se  cuece  y  estando  fría  se  exprime  bien,  se  le  echa  pasas, 
almendras,  canela,  ajonjolí  y  acitrón,  se  baten  los  huevos 
necesarios,  como  para  freir,  y  se  revuelve  todo  untando  la 
sartén  con  manteca  y  se  pone  á  dos  fuegos. 

1,570.  Torta  de  requesón, — Se  baten  doce  huevos  y  allí 
se  desbarata  un  requesón  y  medio  de  mamón  y  se  echa  ca- 


107 

nela  molida,  pasas,  almendras;  ae  unta  una  cazuela  con  man- 
teca, se  echa  todo  y  se  pone  á  dos  fuegos;  se  hacen  cuarte- 
rones, se  echa  en  almíbar  de  medio  punto  á  que  de*  un  her- 
vor, con  su  canela  en  polvo  por  encima, 

1,571.  Otra  torta  de  requesón. — Para  un  real  de  requesón 
dos  bizcochos  duros:  se  desbarata  el  requesón,  se  muelen 
los  bizcochos  y  se  le  mezclan  y  se  baten  cinco  huevos;  se 
hace  miel  de  panela  de  medio  punto  y  ya  mezclado  todo  con 
el  huevo  se  echa  en  la  miel  á  que  cuaje  como  torta,  se  apar- 
ta un  poco  del  huevo  y  se  le  echa  por  encima  y  se  le  pone 
un  comal  con  poca  lumbre. 

1,672.  Torta  de  nuez. — Se  limpian  las  nueces  y  se  dejan 
secar,  luego  se  muelen;  se  toma  una  capa  de  manteca  y  otra 
de  nuez  y  así  se  va  haciendo  hasta  llenar  la  cazuela.  Sobre 
esto  se  va  variando  el  almíbar  con  suavidad  hasta  que  se 
conoce  que  el  mamón  está  bien  mojado,  se  hace  unir  con 
claras  de  huevo,  azúcar  molida  y  unas  gotas  de  limón,  se 
unta  por  encima,  se  le  echa  grajea  y  ajonjolí  y  se  pone  al 
horno  6  se  le  pone  encima  un  comal  con  lumbre. 

1,573.  Torta  de  natillas. — Se  cuece  muy  bien  la  leche  con 
una  raja  de  canela  hasta  que  espese:  se  deja  enfriar  y  se  le 
echan  jemas  de  huevo,  azúcar,  almendra  molida,  se  unta 
una  sartén  con  mantequilla  y  se  pone  una  capa  de  mamón 
y  otra  de  natillas  hasta  llenarlo;  en  seguida  se  le  echa  hue- 
vo batido,  y  sobre  él  azúcar  y  canela  en  polvo;  pasas  y  al- 
mendras. 

1,564,  Torta  de  Moctezuma.— Se  hace  chile  verde  espesi- 
to  y  con  tostante  manteca  y  en  una  tortera  6  sartén  se  po- 
ne una  capa  de  este  chile,  otra  de  tortillas  metidas  primero 
en  manteca  caliente  y  otra  de  queso  fresco  rebanado,  otra 


108 

de  chile  y  asi  sucesivamente  hasta  Henar  la  tartera.  8e  qui- 
ta la  lumbre  de  la  hornilla  y  te  deja  nada  mas  en  un  res- 
coldo, alM  se  coloca  la  tortera. y  se  pone  lumbre  encima  pa- 
ra que  cuaje  como  torta. 

1.575.  Torta  de  chico  tapóte. — Se  limpian  y  se  echan  en 
una  servilleta  y  se  exprimen,  se  muele  clavo,  pimienta  po- 
ca, y  cada  chico  capote  tres  claras  de  huevo  y  seis  yemas; 
se  deshace  un  medio  mamón  y  se  revuelve  todo  y  ya  escur- 
rida se  echa  en  la  almíbar  con  su  pastilla  por  encima, 

1.576.  Torta  de  papas. — Después  de  cocidas  se  muelen 
con  un  poquito  de  azúcar  revolviéndole  queso  aflojo  ralla- 
do, un  poco  de  mantequilla,  sal  si  le  faltare,  unos  huevos 
enteros  sin  batir,  un  polvo  de  pan,  y  bien  revuelto  todo  se 
echa  en  la  sartén  con  manteca  bien  caliente  y  se  pone  4  co- 
cer á  dos  fuegos. 

.  1.576.  Torta  ■  de  dote.  —Se  rebana  el  elote  blanco  y  tier- 
no poniendo  á  cocer  el  grano  en  leche  y  después  de  escu- 
rrido se  muele,  se  revuelve  en  seguida  una  poca  de  asacar  y 
canela  molida  y  la  cantidad  que  se  quiera  de  mantequilla. 
Se  bate  como  para  freir  cuatro  huevos  (esta  cantidad  es  pa- 
ra seis  ú  ocho  elotes)  se  unta  la  tortera  de  mantequilla,  se 
le  echa  una  parte  de  huevo  batido;  después  el  atole  del  elo- 
te y  encima  el  demás  huevo  cubriéndolo  bien.  Cuécese  4 
dos  fuegos  y  4  medio  dorar  se  le  echa  asacar  en  polvo  por 
encima,  dejándola  cocer  bien. 

1,578.  Torta  de  coco. — Para  un  coco  rallado  se  baten  do- 
ce huevos  como  para  freir,  se  revuelven  con  mamón  desmi- 
gajada Se  pone  4  quemar  media  libra  de  manteca  y- se  cue- 
ce la  torta  como  todas  4  un  calor  muy  lento,  pero  al  echar 
la  pasta  en  la  manteca  debe  estar  muy  caliente,  y  cuando 


109 

ya  está  cocida  se  le  agrega  almíbar;  vino  de  Jerez  y  canela 
en  polvo. 

1,579,  Torta  de  angele». — Se  clarífica  libra  y  media  de  a- 
zúcar  y  se  pone  de  medio  punto;  se  le  echa  tina  raja  de  cañe- 
la  á  que  tome  gusto;  se  baten  veinticuatro  yemas  de  huevo; 
ya  que  está  la  miel  fría  se  echan  las  yemas  y  se  pone  á  la 
lumbre  y  se  le  agrega  una  libra  de  almendra  martajada  y 
se  está  meneando  hasta  que  tome  punto  de  cajeta,  y  en  una 
sartén  untada  de  mantequilla  se  pone  á  cocer  á  dos  fuegos, 
Por  encima  se  le  echa  azúcar  y  canela. 

1580,  Torta  de  gloria — Se  hace  arroz  con  leche  espeso, 
que  puede  ser  molido  <S  entero.  Se  tiene  preparada  una  pas- 
ta, al  gusto  de  cada  uno,  y  se  baten  unos  huevos.  Se  pone 
ala  lumbre  una  sartén  untada  de  manteca  que  se  cubre  con 
ruedas  de  huevo,  que  no  se  vea  el  fondo,  y  después  se  va 
echando  una  capa  de  arroz  y  otra  de  pasta  y  así  sucesivamen- 
te, siendo  la  última  de  huevo,  y  se  pone  á  dos  fuegos.  Así 
que  está  cocida  se  parte  en  pedacítos  que  se  echan  en  almí- 
bar. 

1581.  Otra  torta  de  gloria. — A  una  libra  de  almendra  lim- 
pia y  martajada  una  de  azúcar  remolida,  seis  huevos  batidos 
como  para  freir,  se  revuelve  todo  y  se  echa  en  una  sartén 
untada  de  mantequilla,  y  se  mete  al  horno  ó  á  dos  fuegos 
para  que  cueza. 

1,582.  Torta  dd  cielo. — Se  clarifican  dos  libras  de  azúcar 
y  estando  de  punto  de  miel  se  separa  una  en  cada  trasto,  se 
echa  en  una  de  las  cantidades  una  libra  de  almendra  moli- 
da á  que  se  forme  una  pasta,  se  baja,  y  á  la  otra  libra  se  le 
echan  diez  y  seis  yemas  de  huevo  desleídas  en  una  poca  de 
agua  fría  y  se  pone  á  la  lumbre,  cuando  estén  cocidas  se  se- 

UL  CCOINBBJL  POBLANA,— TOM.     U — 8. 


110 

para  y  se  mezcla  oon  almendra,  te  1m  dá  panto  de  puta,  se 
baja  de  la  lumbre  y  te  despolvorea  medio  de  mamón  frío; 
ao  unta  ana  eaoerola  de  mantequilla  y  ae  echa  aquello  allí 
para  que  ae  cueza  á  dos  fuegos:  para  saber  cuando  ya  está 
se  le  mete  un  popote  y  saliendo  limpio  ya  está;  se  deja  en- 
friar en  el  mismo  molde,  se  vacia  á  un  platón  redondo  y  se 
bafla  por  encima  oon  almíbar  espesa. 

1 .683.  Torta  de  almendra,  —A  libra  y  media  de  azúcar  he- 
cha almíbar' de  panto  alto,  se  le  echa  una  libra  de  almendra 
marta  jada  con  unas  almendras  amargas,  al  gustó,  y  seis  ye- 
mas de  huevo  batidas;  estando  esta  pasta  se  echa  en  doce 
claras  de  huevo  muy  bien  batidas  y  seis  yemas;  se  unta  una 
sartén  con  mantequilla  y  se  le  echa  la  pasta  y  se  pone  á  co- 
cer á  dos  fuegos,  no  en  horno  porque  se  asienta;  ya  que  es- 
tá se  le  unta  almíbar  de  punto  muy  alto  por  encima,  y  se 
repite  hasta  que  forme  un  betún. 

1.684.  Torta  de  almendras. — Se  muele  una  libra  de  al- 
mendra con  huevo  para  que  no  se  aceite;  separadamente  un 
puño  de  almendras  amargas  y  una  libra  de  azúcar  todo  re- 
molido que  se  e -ha  á  la  almendra  en  tres  partes,  para  que 
se  mezcle  bien;  se  le  añaden  veinticuatro  yemas  de  huevo, 
se  revuelve  bien  y  se  bate  hasta  que  esté*  bien.  Ta  en  este 
estado  se  le  echa  un  pocilio  de  raspadura  de  limón  real,  se 
embarra  el  molde  de  mantequilla,  se  coloca  la  masa,  se  for- 
ra con  un  papel  untado  también  de  mantequilla  y  se  mete 
en  el  horno;  ya  que  está  fría  se  hace  la  almíbar  de  punto 
de  caramelo  y  oon  una  pluma  se  embarra  la  torta  para  que 
no  se  queme. 

1,686.  Torta  de  almendra.— -A>  media  libra  de  almendra 
esperanza  treinta  y  seis  almendras  amargas,  cuatro  onzas  de 


111 

azúcar,  la  cascara  de  un  limón  verde  rallada,  la  almendra 
toda  se  muele  junta,  un  poco  entera,  la  azúcar  bien  molida, 
se  baten  ocho  huevos,  las  claras  á  parte  de  las  que  se  cojera 
para  rociar  la  almendra  al  tiempo  de  molerla,  para  que  no 
se  aceite;  se  baten  las  yemas  y  en  ellas  se  echará  la  azúcar; 
después  de  bien  batido  todo  se  incorporan  claras,  yemas, 
limón  rallado  y  almendras,  se  unta  la  sartén  con  mantequi- 
lla y  se  mete  al  horno. 

1.586.  Torta  de  maíz. — Se  compra  el  maíz  cacahuazentle, 
se  muele  y  se  cierne,  se  muele  azúcar,  se  cojen  tres  huevos 
y  se  pesan  los  tres;  y  de  lo  que  pesen  los  huevos,  se  pesa  la 
misma  cantidad  de  maíz,  la  misma  de  azúcar,  y  la  misma  de 
mantequilla  y  cuatro  onzas  de  almendra;  se  muele  la  almen- 
dra con  una  poca  de  leche.  Se  bate  la  azúcar,  e)  maíz  y  la 
mantequilla, -todo  junto,  y  á  parte  se  baten  las  yemas  como 
para  huevos  reales,  y  las  claras  como  para  turrón,  después 
se  revuelve  todo  con  lo  que  se  ha  batido  y  se  bate  hasta  que 
quede  como  espuma.  En  seguida  se  unta  el  molde  de  man- 
tequilla, se  vacía  todo  en  el  molde  y  se  manda  al  horno  á 
que  se  cueza.    Se  ha  de  batir  mucho. 

1.587.  Torta  de  pifia  de  losvireye*. — Se  quitan  los  corazo- 
nes de  las  pinas,  se  pican  y  se  ponen  á  cocer;  cuando  ya  están 
se  echan  en  almíbar  clarificada;  cuando  toman  punto  sé  vuel- 
ven á  sacar  y  se  escurren  bien.  Se  cuece  media  libra  de  ar- 
roz remojado  que  se  pone  en  una  servilleta  y  se  cuelga  .den- 
tro de 'una  olla  para  que  cueza;  ya  bien  cocido  se  saca  y  se 
deja  escurrir  á  que  no  le  quede  ni  una  gota  de  agua;  se  ba- 
ten huevos  en  proporción,  que  deben  ser  como  de  ocho  por 
cada  pina,  y  en  ellos  se  echa  la  pifia  escurrida,  el  arroz,  pa- 
sas, almendras  y  piñones,  y  se  revuelve  todo  muy  bien;  se 


112 

anta  ana  cazuela  con  manteca,  se  echa  en  ella  todo  yiepo 
na  á  dea  fuegos.  Cuando  está  cocido  ae  deja  enfriar  la  tortí 
ae  hacen  euartéroncitos,  y  ae  echan  en*  almíbar. 

1,688.  Torta  de  atole.— Se  hace  el  atole  de  leche  desdi 
la  víspera  con  el  punto  alto,  de  modo  que  á  otro  día  ae  pue 
da  cortar  en  rebanadas  delgadas;  se  envuelven  estas  rebana 
das  en  bizcochos  finos  molidos;  se  pone  una  capa  de  estas  re 
bañadas  y  otra  de  mamones  con  mantequilla  derretida  poi 
encima,  se  pone  á  dos  fuegos,  y  cuando  está  se  le  echa  azd 
car  en  polvo  por  encima  y  canela  6  almíbar. 

1.589.  Torta  de  mantequilla,  huevo  y  bizcocho. — Se  lavs 
muy  bien  la  mantequilla  y  ae  hace  una  pelota  y  á  otro  dif 
se  rebana  y  se  Tan  poniendo  en  una  cazuela  una  capa  di 
mantequilla  y  otra  de  azúcar  y  canela,  otra  de  huero  y  ota 
de  bizcocho  duro  molido,  hasta  llenar  la  cazuela,  debiende 
serla  primera  y  última  de  mantequilla,  con  bastante  azúcaí 
y  canela  por  encima.  Se  pone  á  dos  fuegos  hasta  que  cuaje 
que  es  cuando  despega. 

1.590.  Torta  de  dama*. — Se  muele  una  libra  de  azúcar  j 
otra  de  almendras.  Mientras  se  está  moliendo  se  le  tú  echan 
do  agua  de  azahar;  se  baten  siete  huevos  con  claras  junt< 
con  la  almendra  y  el  azúcar,  y  se  unta  con  bastante  mante 
quilla  6  manteca  la  sartén;  se  pone  á  cocer  entre  dos  fuegot 
al  horno.  Por  encima  se  ponen  unas  pastillas  de  ajonjolí 

1.591.  Torta  de  leche  y  mamón. — A  una  taza  de  leche  cin 
00  yemas  de  huero;  se  desbaratan  estas  en  leche  y  se  en 
dulzan  al  gusto.  Se  embarra  una  sartén  de  manteca  y  enci 
ma  se  pone  un  papel;  sobre  el  papel  se  pone  una  capa  d< 
mamón  rebanado  y  se  le  echa  la  leche  á  que  se  empape  biei 
y  nn  polvo  de  canela;  llena  la  sartén  se  pone  á  dos  fuego: 


113 

Se  conoce  que  ya  está  cocida  cuando  metiendo  un  popote  sa- 
le limpio.  Se  polvorea  con  azúcar  y  canela. 

1.592.  Torta  de  arroz. — Se  cuece  el  arroz  con  poca  agua, 
un  pedazo  de  azúcar,  una  cucharada  de  manteca,  azafrán 
v  sal;  se  enfria  y  se  unta  una  tortera  con  manteca,  se  baten 
huevos,  se  mezclan  con  el  arroz,  que  no  estará  muy  blando; 
le  echa  una  capa  de  arroz  en  la  tortera,  encima  el  picadillo 
}ue  ya  estará  guisado,  con  pasas,  almendras,  aceitunas  y 
alcaparras,  especias  tinas  y  recaudo,  y  se  pone  encima  la  otra 
apa  de  arroz,  se  le  echa  encima  una  capa  de  huevos  batidos 
i  mas  de  los  que  tienen  adentro,  y  se  pone  á  dos  fuegos  á 
}ue  acabe  de  cocer;  para  ir.,  á  la  mesa  se  le  pone  polvo  de 
izúcar  por  encima. 

1.593.  Otra  torta  de  arroz. — A  cuatro  onzas  de  arroz  re- 
mojado do  un  día  para  otro,  una  pina  rallada  con  el  dulce 
lecesarío.  Se  pone  á  cocer  todo  junto  y  se  le  echa  clavo, 
sánela,  pimienta,  azafrán  y  ya  que  está  frío  se  le  echan  seis 
slaras  y  dos  yemas  batidas,  se  echa  en  la  manteca  á  que  cua- 
e  á  dos  fuegos,  se  exprime  y  se  echa  en  el  almíbar  con  to- 
los olores,  se  hierve  hasta  que  se  cale  y  por  encima  pastilla 
solorada. 

1.594.  Torta  de  arroz. — Media  libra  de  arroz,  media  libra 
le  azúcar,  media  libra  de  mantequilla  y  ocho  huevos.  Se 
nuele  el  arroz  y  la  azúcar,  se  derrite  la  mantequilla,  se 
xme  en  una  toazuela  el  arroz,  la  azúcar,  la  mantequilla, 
as  yemas  y  una  clara  sin  batir,  se  bate  mucho  y  ya  que  es- 
á  de  ponto  se  le  echan  las  siete  claras  batidas  como  para 
.urron,  se  le  echa  y  se  bate  otro  poco:  se  embarra  el  molde 
le  mantequilla,  se  echa  todo  en  él  y  se  pone  á  dos  fuegos  6 
e  mete  al  horno. 


114 

1,59&  Torta  de  anos. — Después  de  lavado  se 
libra  de  artos,  se  muele  á  que  quede  como  harina  ya  que  se 
paso*  por  el  tamiz;  después  se  muele  media  libra  do  azúcar 
y  ae  tamisa,  ae  toma  lo  que  cabe  en  una  cuchara  de  plata, 
de  almidón,  7  deapuea  de  molido  ae  mezcla  con  la  harina  y 
azdcar,  y  esto  se  pone  en  una  cazuela  grande: ya  ae  tendrán 
batidas  como  para  turrón  cinco  claras  de  huero  y  ya  que  es- 
tá muy  dura  se  le  agregan  cinco  yemas  de  huevo,  y  á  la  ha- 
rina se  le  agregan  cinco  hueros  enteros,  una  cucharada  de 
manteca  y  sal  y  media  libia  de  mantequilla;  ya  que  está  to- 
do esto  en  la  harina  se  le  agregará  los  huevos  batidos,  se 
bate  con  la  mano  6  con  una  cuchara,  ya  se  tendrá  prepara- 
da una  sartén  untada  con  mantequilla;  ya  que  está  se  le 
echa  un  polvo  de  bizcocho  catarino  y  en  el  fondo  bastante, 
y  en  los  lados  se  echa  la  masa  y  mas  polvo  de  bizcocho  y 
luego  se  pone  á  cocer  en  una  hornilla,  se  le  quita  y  ae  deja 
en  un  rescoldo  y  encima  se  le  pone  un  conmuto  con  lumbre 
y  se  tiene  cuidado  de  meterle  un  popote  y  si  sale  limpio  ya 
está,  se  saca  de  la  budinera  para  que  no  se  pegue  el  bizco- 
cho.— Se  advierte,  que  ai  loa  huevos  son  chicos  se  baten  sois 
en  lugar  de  cinco. 

1,696.  Torta  de  arroz.  —Se  cuece  el  arroz  en  una  poquita 
de  agua  oon  una  cascara  de  limón,  luego  para  que  se  acabe 
de  cocer  se  le  echa  la  leche  y  la  azúcar,  se  baten  tres  hue- 
vos como  para  freír,  se  revuelve  allí  el  arroz,  dos  onzas  de 
almendra  molida  y  un  pedazo  de  tuétano. 

1,597.  Torta  dé  arroz. — Se  pone  una  media  libra  de  airo? 
á  cocer  y  se  le  va  echando  poco  á  poco  un  cuartillo  de  nata 
de  leche  y  un  trozo  de  manteca,  la  segunda  corteza  del  li- 
món y  sal ;  cuando  el  arroz  está  abierto  y  bien  espeso  se  qui- 


116 

ta  el  limón  y  se  deja  enfriar  en  otra  vasija,  añadiendo  seis 
yemas  de  huevos  batidas  con  azúcar  y  cuatro  claras  batidas 
con  una  6  dos  cucharadas  de  flor  de  naranja;  se  unta  con 
manteca  una  cazuela  ó*  el  molde  de  la  figura  que  se  quiere 
dar  á  la  torta,  polvoreándola  con  miga  de  pan;  en  ella  se 
echa  el  arroz  y  se  pone  al  hornillo  con  mucho  fuego  en  su 
cubierta.  Cuando  la  torta  haya  tomado  color  suficiente  se 
le  da  vuelta  sobre  un  plato.  De  este  mismo  modo  se  hacen 
las  tortas  de  fideos,  de  sémolas,  etc. 

1.598.  Torta  ó  brioche  francés. — Oon  una  libra  de  flor  de 
harina,  dos  onzas  de  azúcar  en  polvo  y  una  docena'de  hue- 
vos se  forma  una  masa,  añadiendo  una  onza  de  levadura  or- 
dinaria, 6  de  cerveza  si  la  hubiese.  Déjese  la  masa  metida 
dentro  de  una  servilleta  durante  doce  6  catorce  horas  para 
que  UvawU  6  fermente,  y  háganse  bollitos,  tortas,  etc,  y 
se  cuecen  al  horno. 

1.599.  Torta  dd  cielo. — Se  limpia  y  remoja  una  libra  de 
arroz,  se  muele  y  se  pone  á  cocer  con  seis  cuartillos  de  le- 
che,  colada  por  un  cedazo,  con  el  azúcar  necesaria,  y  hasta 
el  punto  de  manjar  blanco;  se  cuece  media  libra  de  carne 
de  puerco  maciza  y  picada,  y  después  se  vuelve  á  picar,  se 
fríen  unos  dientes  de  ajos,  y  el  picadillo  se  echa  en  mante- 
ca, una  poca  de  agua,  canela,  clavo  molido,  vino  blanco, 
piñones,  pasas  deshuesadas,  almendras  y  algunos  bizcochos . 
duros  molidos,  se  unta  una  tortera  también  con  manteca  y 
se  les  polvorea  un  poco  de  bizcocho  molido,  se  le  pone  una 
capa  de  leche,  polvoreándole  con  mas  bizcocho,  otra  capa 
de  picadillo  con  bizcocho,  como  á  la  anterior,  hasta  que  se 
pongan  tres  capas  de  leche  y  tres  de  picadillo  en  el  orden 
expresado,  la  última  capa  ha  de  ser  de  leche,  sobre  la  que 


116 


se  echa  mas  bizcocho,  y  en  seguida  ce  pone  entre  dos  fuegos 
mansos  á  cocer  ó  en  un.  horno;  luego  que  se  baja  cuajado, 
se  pondrá  encima  azúcar  y  canela  molida,  y  se  sirve  fría. 

1.600.  Torta  de  sémola.  —Póngase  á  hervir  medio  cuarti- 
llo de  leche  echando  dentro  sémola  hasta  que  se  forme  una 
papilla  muy  espesa;  déjese  cocer  un  poco,  aromatícese  con 
agua  de  flor  de  naranja,  cortesa  de  limón  6  vainilla,  aiaadien- 
do  azúcar,  cuatro  yemas  de  huevo,  además  cuatro  claras 
batidas  como  nieve.  Se  unta  con  manteca  un  molde  6  cace- 
rola, y  se  polvorea  con  pan  finamente  rallado;  échese  den- 
tro la  mezcla,  y  se  acaba  de  cocer  rodeando  el  molde  con 
cenizas  calientes  y  fuego  muy  templado  encima  de  la  tapa- 
dera. Se  sirve  muy  caliente  y  dorada  como  la  torta  de  maíz. 
— La  sémola  es  una  harina  muy  granada,  de  la  misma  es- 
pecie que  la  que  sirve  para  hacer  los  fideos. 

1.601.  Torta»  de  pan  con  manteca.  — Se  cortan  las  rebana- 
das  de  pan,  se  tuestan  en  parrillas,  se  humedece  e)  pan  en 
agua  y  se  fríen  con  manteca  las  tostad js;  cuando  se  saquen 
de  la  sartén  se  les  echa  azúcar  y  canela  y  se  sirven.   ' 

1.602.  Twia  de  almendras. — Aproximadamente  se  toma 
de  harina  cuatro  onzas,  otras  cuatro  de  mantequilla  fresca 
é  igual  cantidad  de  azúcar  en  polvo,  se  machacan  tres  onzas 
de  almendras  dulces,  se  añade  cortezas  de  limón  6  una  ó 
dos  ouoharadas  de  flor  de  naranja,  se  echan  cuatro  6  seis 
huevos  bien  batidos,  y  se  mezcla  t:>do  en  el  mortero  para 
hacer  una  pasta,  se  toma  uní  tortera,  ae  unta  el  fondo  con 
manteca  y  se  hace  cocer  á  fuego  lento  con  lumbre  debajo 
y  encima,  y  se  forma  la  torta,  que  se  puede  servir  fria  6  ca- 
liente, pero  siempre  echándole  azúcar  'en  polvo  por  encima. 

1.603.  Tortade  papas. — Se  cuecen  á  vapor  las  papas;  dea- 


117 

pues  de  haberlas  mondado  se  mojan,  añadiendo  manteca  y 
leche,  en  la  cual  se  haya  desleído  el  azúcar;  todo  esto  debe 
hervir  y  se  echa  en  una  vasija  de  barro,  dejándolo  enfriar; 
se  continúa  lo  mismo  que  para  la  torta  de  arroz. 

1.604.  Torta  de  miga  de  pan. — Se  toma  la  miga  de  pan 
fresco,  se  echa  en  nata  hirviendo,  se  menea  mientras  hier- 
ve, añadiendo  á  la  nata  un  trozo  de  mantequilla,  corteza 
de  limón,  azúcar,  si  se  quiere,  y  pasas  de  Corinto;  se  con- 
cluye en  los  mismos  términos  que  la.  torta  de  arroz. 

1.605.  Fritura»  ó  rosetas. — Se  pone  á  hervir  una  taza  de 
leche  con  una  cucharada  de  mantequilla,  luego  que  suelta 
el  hervor  se  le  echa  una  taza  igual  de  harina  poco  á  poco, 
y  meneándola  sin  cesar  para  que  no  se  haga  bolas;  y  así  que 
despega  bien  del  cazo,  se  aparta  y  cuando  está  frío  se  le  van 
mezclando  cuatro  huevos,  uno  por  uno,  batiendo  con  una 
cuchara  hasta  que  hace  ojos,  y  se  va  echando  en  la  mante- 
ca con  una  cuchara  rociándolos  calientes  con  azúcar  molida. 

1.606.  Fritura'  ó  roseta  de  sartén, — Se  hace  una  masa  con 
un  cuartillo  de  harina,  tres  huevos,  la  cuarta  parte  de  man- 
teca, un  poco  de  sal,  nata  y  una  cucharada  de  aguardiente 
catalán ;  se  deja  reposar  la  masa  tres  horas  y  después  se  adel- 
gaza con  un  palote  áque  quede  de  un  grueso  regular.  En 
eguida  se  corta  de  la  figura  que  se  quiera,  se  fríen  y  se  pol- 
vorean por  ambos  lados  con  azúcar.    Quedan  exquisitos. 

1,907.  Timbal  de  macarrones. — A  una  libra  de  harina  un 
huevo,  medio  pocilio  de  agua  de  sal,  cuatro  onzas  de  man- 
teca, cinco  de  mantequilla  y  media  de  canela.  Se  hace  la 
masa  y  se  endulza  con  azúcar  en  polvo,  Se  fríe  una  pollita 
tierna,  se  parte,  en  pedazos  pequeños,  se  le  mezclan  dos  pu- 
ños grandes  de  cebolla  picada  con  suficiente  clavo,  pimien- 


118 

ta  y  sal;  se  le  mezclan  también  una  libra  de  macarrones  de 
huero,  cocidos  en  agua  de  sal,  cortados  en  pedazos  peque- 
nos  y  escurridos  en  un  cedazo. 

Apartado  todo  esto  de  la  lumbre  se  le  mezclan  tres  pu- 
ños de  queso  de  Flandes  rallado.  Se  pone  una  sartén  en  la 
lumbre  untada  de  mantequilla,  se  expolvorea  con  bizcocho 
duro  y  sé  forra  con  la  masa.  Se  pone  el  relleno,  se  cubre 
con  la  masu  tendida  con  el  palote,  se  meta  en  el  horno  y  se 
conoce  que  está  cocido  en  que  despega  bien  del  caso. 

1.608.  Otiv  timbal  de  ma&imme*. — Se  pone  en  una  cace- 
rola  proporcionada  media  libra  de  macarrones  con  una  onza 
de  manteca,  sal  y  pimienta  y  la  suficiente  agua  para  que  los 
cubra;  cuando  el  aguase  haya  consumido  se  ralla  media  li- 
bra de  queso  de  Gruyere  y  se  echa  en  los  macarrones  con 
una  onza  de  manteca;  se  bate  hasta  que  el  queso  este*  bien 
fundido.  En  otra  cacerola  se  pone  manteca  barnizándola 
bien  con  ella;  se  la  guarnece  de  una  pasta  de  dos  líneas  de 
grueso  toda  ella  y  se  ponen  dentro  los  macarrones  cubrién- 
dolos con  una  capa  de  la  misma  pasta  y  grueso;  se  hacen 
cocer  á  fuego  lento,  con  lumbre  por  encima  y  por  debajo, 
por  media  hora,  dándole  vueltas  después  sobre  el  plato  en 
que  se  ha  de  servir. 

1.609.  BuñutUn  de  arroz. — Se  lava  una  libra  de  arroz,  se 
pone  al  sol,  se  muele  y  se  cierne  en  un  cedazo  de  panade- 
ría; estando  cernido  se  baten  catorce  huevos  primero  las 
claras  y  luego  se  revuelven  las  yemas  y  el  arroz,  estando 
todo  bien  revuelto  se  va  echando  con  una  cachara  como  tor- 
re j  i  tas  en  la  manteca  caliente,  así  que  están  fríos,  ya  se  tie- 
nen dos  libras  de  azúcar  hecha  almíbar  aguadita,  con  una 
poca  de  agua  de  azahar,  se  echan  los  buñuelos  en  la  almí- 


119 

bar  á  que  den  un  hervor;  se  aparta  y  se  dejan  calcando  has* 
ta  otro  dia  que  ne  vuelven  á  la  lumbre  para  que  queden  de 
punto,  si  están  secos,  que  se  hayan  chupado  toda  la  miel,  se 
les  echa  mas  hasta  que  está  de  punto  de  conserva;  entonces 
se  aparta,  y  ya  en  el  plato  se  les  echa  canela  por  encima. 

1,610.  Otros  buñuelo*  de  ama. — La  víspera  de  hacerlos 
buñuelos,  se  ponen  á  remojar  dos  libras  de  arroz:  al  dia  si- 
guiente se  remuele  muy  bien  echándole  una  poca  de  leche 
conforme  se  vaya  moliendo;  después  en  un  cazóse  deshace 
un  cuartillo  de  leche,  que  no  quede  ni  muy  espeso  ni  muy 
suelto  y  dos  cucharadas  bien  llenas  de  manteca  y  un  grano 
de  sal;  en  este  estado  se  pone  á  la  lumbre  sin  dejar  de  me- 
nearla; cuando  está  á  medio  cocer  se  le  echa  otra  cucharada 
de  manteca  y  un  poco  de  anís;  se  conoce  que  está  bien  co- 
cida ouando  está  un  poco  amarilla  y  entonces  se  aparta  de 
la  lumbre  para  que  enfrie,  después  se  pone  en  nna  mesa 
para  amasarla,  y  se  le  echan  veintinueve  huevos  con  claras 
y  yemas,  pero  se  van  echando  poco  á  poco,  se  amasa  mucho 
dándole  muchos  golpes;  se  pone  una  freidera  con  el  fondo 
ancho  y  que  cubra  la  lumbre  con  tre»  libras  de  manteca,  y 
en  estando  bien  caliente  se  untan  las  palmas  de  la  mano  con 
manteca,  se  ooje  una  bola  de  masa  y  se  hace  un  agujero 
con  el  dedo  en  medio,  y  se  van  echando  en  la  manteca  sin 
dejar  de  estar  volteándolos  y  dándoles  golpes  por  encima 
con  una  varita.  Se  clarifican  dos  libras  de  azúcar  y  después 
de  colada,  se  pone  á  la  lumbre  y  se  le  echan  dos  hojas  de 
naranja  y  estando  de  punto,  se  les  echa  por  encima  á  los 
buñuelos.. . 

1,911.  Buñuelo*  de  arrroz.  — Se.lava  el  arroz,  se  pone  á  se- 
car; se  muele,  se  cierne  como  harina,  luego  se  echa  en  un 


130 

cacito  oon  una  poca  de  agua  tibia  y  au  aal;  m  deshace  como 
atole,  te  pone  á  cocer  y  se  está  meneando  sin  dejarlo  para 
que  no  se  haga  tolondrones;  estando  bien  cocido,  se  baja, 
se  echa  en  un  platón  y  así  que  están  fríos  se  le  van  echando 
huevos  hasta  que  se  deshaga;  se  hacen  en  la  forma  de  los 
de  yiento  y  si  necesitan  mas  huevos  se  le  echan. 

1.612.  Buñuelos  de  leche. — A  una  libra  de  harina  una  ta- 
za de  leche,  ocho  huevos,  solo  dos  con  claras,  una  taza  de 
mantequilla  derretida,  un  poco  de  anís  molido  y  una  poqui- 
ta de  sal;  se  amasa  y  se  fríen  los  buñuelos;  su  miel  por  en 
cima. 

1.613.  Otros  buñuelos  de  leche. — En  medio  cuartillo  de  le- 
che, se  deshacen  nueve  onzas  de  almidón,  se  ouela,  se  le  e- 
cha  sal  y  se  pone  á  cocer  hasta  que  hace  bola;  se  está  me- 
neando sin  cesar,  y  así  que  está  frío,  se  le  echan  veinte  ye- 
mas y  se  deshacen  bien  en  la  masa,  que  no  le  quede  tolon- 
drón; y  se  echan  á  freir  bolitas  chiquitas:  la  manteca  no 
muy  caliente  para  que  vayan  reventando  y  luego  se  echan 
en  almíbar. 

1.614.  Buñuelo*  de  leche. — Se  baten  tres  huevos  en  un 
lebrillo  con  su  sal,  se  echa  encima  un  cuartillo  de  leche,  se 
menea  bien;  se  va  echando  harina  cernida  y  se  menea  bas- 
tante; luego  se  bate  con  las  manos  hasta  que  se  haga  una 
masa  como  de  buñuelos  comunes,  que  no  queda  ni  muy  du- 
ra ni  muy  blanda,  y  cuando  este'  bien  batida,  se  van  hacien- 
do los  buñuelos  oon  sus  agujeros,  y  se  van  friendo  con  lum- 
bre moderada. 

1.615.  Buñuelos  de  queto— A  cuatro  pufiitbs  de  harina  me- 
dio queso  fresco,  se  muele  bien,  se  le  echa  una  taza  de  man- 


121 

teca  fría,  y  ana  poca  de  agua  fría;  se  amasa  todo  tony  bien, 
se  hacen  loa  buñuelos  y  se  les  echa  almíbar  por  encima. 

1,616.  Buñuelos  de  queso  fresco — Se  toman  cuatro  quesos 
frescos,  se  les  quita  la  cascara  y  se  amasa  como  quien  amasa 
pan;  luego  se  pone  en  un  lebrillo  seco  y  allí  sa  echan  ye- 
mas de  huevo,  las  que  se  conozcan  suficientes,  para  que  está 
blanco  se  le  echa  manteca  caliente,  si  estuvieren  duros  éche- 
seles mas  yemas,  y  luego  se  echan  en  la  miel. 

1,917  Otros  de  queso. — fin  un  metate  limpio  se  muele  el 
queso,  fresco,  media  libra  de  harina,  una  onza  de  manteca, 
se  amasa  bien  y  se  pone  en  una  mesa,  se  extiende  con  un 
palote,  se  corta  cun  una  taza,  y  ahorcados  se  fríen  y  se  van 
echando  en  la  almíbar,  y  en  los  platones  con  canela. 

1,618.  BuñueUios  de  maíz. — Se  muele  maíz  en  seco,  se 
pone  á  hervir  agua  con  anís,  manteca  y  sal,  y  así  que  se  des-, 
migaja,  se  echa  en  un  lebrillo  á  enfriar,  se  le  echan  huevos 
los  necesarios  para  que  esponje,  se  fríe  en  manteca  no  muy 
caliente  y  se  echa  á  hervir  en  almíbar. 

1.519.  Buñuelo*  de  maíz. — Se  lava  bien  el  nitztamal,  se 
muele,  se  cuela,  y  se  deja  asentar;  á  una  taza  de  asiento  se 
le  echa  taza  y  media  de  leche,  ocho  yemas,  dulce  al  gusto 
y  un  polvo  de  canela;  se  revuelve  bien  y  se  pone  á  cocer 
hasta  que  tome  punto  y  se  vacia  en  un  platón  para  que  en- 
fríe; se  clarifican  dos  libras  de  azúcar,  se  baten  cuatro  hue- 
vos como  para  chiles  y  se  corta  la  masa  en  cuarterón  cites; 
se  le  agrega  el  huevo,  un  polvo  de  harina,  se  van  friendo  en 
manteca  como  torrejas,  y  se  ponen  en  almíbar  á  que  den 

un  hervor. 
» 

2,620.  Oiros  buñuelos  de  maíz.  -Se  lava  bien  el  maíz  á 
que  quede  muy  blanco  y  se  cuela  como  para  atole,  te   deja 


122 

a»entar  toda  la  noche  y  á  otro  día  te  le  tira  el  agua  y  el  alien- 
to que  queda,  te  le  echa  tal  y  manteca,  y  ee  pone  á  cocer 
en  una  tarten  sin  dejarlo  de  menear.  Aaí  que  ae  haga  una 
costra  en  el  fondo  ae  taca  la  masa  para  arranoiraela  toda;  ae 
le  unta  un  poco  de  manteca  y  así  te  va  haciendo  hasta  que 
ha  cocido  la  masa;  cuando  ya  se  puede- agarrar  y  después 
que  se  ha  enfriado  un  poco,  se  le  echa  un  poco  de  anís  ente- 
ro y  huevos  con  todo  y  claras  hasta  que  se  conozca  que  ya 
no  admite  mas  la  masa.  Hecho  esto  se  van  friendo  las  ros- 
quitas  y  se  les  echa  miel  por  encima;  á  estos  les  está  mejor 
la  miel  de  cafiav  á  los  otros  la  de  azúcar. 

1,621.  Bnñueloe  de  vietüo. — una  libra  de  harina  se  desba- 
rata en  cuartillo  y  medio  de  sgua;  se  pone  á  la  candela  un 
cazo  con  una  Usa  de  agua  y  media  de  manteca  y  allí  se  va 
echando  dicha  harina  con  un  poco  de  anís.  8e  bate  el  mis- 
mo tiempo  hasta  que  esta  masa  esté*  bien  cocida;  después  se 
aparta  y  así  que  esté  fría  se  bate  con  los  huevos  que  se  le 
van  eahando  poco  á  poco;  estos  serán  diez,  nada  mas  cinco 
enteros  y  cinco  sin  claras;  también  se  pone  á  cocer  un  po- 
cilio de  agua  con  anís,  un  grano  de  sal  y  lo  que  cabe  en  tres 
dedos  de  tequezquite;  de  esto  se  le  echan  dos  cucharadas  y 
así  que  está  bien  batida  la  masa,  se  pone  cerca  de  la  candela 
como'una  hora;  y  después  se  van  haciendo  los  buñuelos  en 
bastante  manteca  para  que  esponjen. 

1,922.  Otras  bufatelo*  de  viento. — A  cada  taza  de  harina 
que  se  va  midiendo  y  echando  en  la  paila,  una  taza  de  agua 
caliente  y  se  está  meneando  para  que  no  haga  bolas;  ya  que 
está  medida  libra  y  media  6  dos  libras  y  bien  desecha,  se 
le  echa  sal  molida,  un  poco  de  anís  y  cuartilla  de  manteca 
sin  dejar  de  menearla;  y  así  que  truens  y  se  pone  de  modo 


123 

que  es  difícil  menearla,  te  coje  una  poquita  de  aquella  ma- 
sa entre  los  dedos  y  se  hace  bolita  sin  pegarse  á  los  dedos; 
ya  que  está  cocida,  se  vacia  en  un  trasto  á  que  se  enfríe  un 
poco  y  se  le  echa  á  cada  libra  catorce  huevos,  siete  enteros 
y  siete  solo  las  yemas;  se  amasa  mucho  dándole  palmadas 
hasta  que  queda  suave  y  esponjada.  Se  unta  uno  las  manos 
con  manteca  y  se  hace  una  bolita  de  la  masa  poco  mas  gran- 
de que  una  nuez,  y  se  hace  el  agujero  en  medio  que  viene 
á  quedar  como  un  rosque  tito;  se  echa  en  la  manteca  calien- 
te á  que  fría  dándole  golpecitos  por  encima  con  la  cuchara 
para  que  esponjen,  así  que  están  dorados,  se  pone  en  el  pla- 
to, se  les  echa  almíbar  por  encima  y  un  poco  de  grajea. 

1.623.  Buñuelos  de  viento  de  atole.  — Se  muele  el  nitztamal 
como  atole,  se  deja  una  olla  hasta  otro  dia;  se  le  quita  el 
agua;  y  la  masa  se  echa  en  un  cacito ¿  dos  tazas  de  leche, 
tantito  anís  y  un  terrón  de  azúcar,  dos  cucharadas  de  man- 
teca; se  cuece  hasta  que  despega  y  huela  á  masa  de  tama- 
les: se  echa  en  un  lebrillo  y  frío  se  le  echan  tres  huevos 
con  clara  y  tres  sin  ellas;  ya  "que  está  dura  y  batida  se 
van  echando  los  buñuelos  en  manteca  no  muy  caliente, 
echándoles  la  manteca  por  encima  para  que  abran  echados 
en  el  almíbar  que  tengan;  su  agua  de  azahar  y  su  grajea  por 
encima. 

1.624.  Otros  de  viento. — A  una  taza  de  agua  ó*  leche  con 
tantito  anís  y  manteca,  ya  muy  caliente  otra  taza  de  harina 
y  frío  se  le  echan  los  huevos  necesarios:  ya  cocido  y  amasa- 
do, se  van  haciendo  y  echando  en  la  manteca  y  se  están 
meneando  hasta  que  se  hace  bola. 

1.625.  Otros  buñuelos  de  viento. — A  una  taza  de  harina, 
diez  huevos,  su  anís,  se  deslíe,  se  le  echa  sal  y  seponeácp- 


124 

cor  hasta  qné  despegue  del  cazo;  se  echa  cuartilla  de  man- 
teca, y  en  estando  tibia  se  amasa  y  se  deja  reposar;  luego  se 
fríen  en  bastante  manteca. 

1.626.  Bufrcefof  de  viento. — Se  cuece  la  harina  como  pa- 
ra poleadas,  y  y*  que  está  un  poco  espesa,  se  le  echan  cu- 
charadas de  manteca;  se  baten  los  huevos  neoesarios,"se  re- 
vuelven con  las  poleadas  y  poco  á  poco  se  van  echando  á 
freír,  que  no  este*  muy  caliente  la  manteca. 

1.627.  Otro»  de  tiento. — Se  ooje  media  libra  de  harina  flor, 
se  deshace  en  agua  fría  como  para  hacer  hostias  y  una  poca 
de  sal,  luego  se  calienta  una  poca  de  manteca  en  una  sartén 
y  se  echa  allí  meneándola;  y  batida  como  para  tortilla  de 
huevos,  con  ün  cucharon  en  la  sartén  sobre  unas  brasas, 
se  vendrá  á  hacer  una  masita  encerada,  que  se  cuece  bien, 
cosa  que  no  se  pegue  y  haga  cortesa,  porque  todo  está  ea 
que  esta  masa  salga  buena  y  bien  cocida.  Se  echará  en  un 
almirez  con  los  huevos  que  fueren  necesarios;  la  mitad  con 
claras  y  la  mitad  sin  ellas;  así  que  estén  blandos,  se  fríen 
y  se  pasan  por  almíbar;  en  los  platos  se  les  echa  canela. 

1.628.  Buñuelos  de  mentó.— Se  cuece  la  harina  como  para 
polladas  con  tontito  anís  y  manteca,  menos  sal  y  así  que 
ya  está  bien  cocida  que  este*  como  engrudo,  y  que  se  hagan 
como  fideos  en  el  cazo,  sobaja  de  la  lumbre  y  se  pone  á  en. 
fríar;  así  que  esté*  fría  se  baten  los  huevos  competentes;  y 
se  echa  la  harina  cocida;  se  bate  bien  hasta  que  esté*  desleí- 
da, que  no  le  quede  grano;  luego  se  coge  una  cazuela  con 
manteca  que  no  este*  muy  caliente;  con  una  cuchara  se  va 
batiendo  para  que  se  frían,  y  luego  se  ponen  en  un  plato 
sirm  elado  por  encima,  cuando  se  está  cociendo  la  harina,  en 


125 

estando  espeta  para  que  no  se  pegue  en  el  caso,  se  k  eoha 
una  poquita  de  manteca,  se  pone  á  cocer  espesa. 

1,629.  Otro»  de  viento. — Para  -cada  libra  de  harina  doce 
huevos,  se  echa  la  harina  en  sartén,  se  le  echa  á  la  libra  de 
harina  su  anís,  un  poco  de  manteca,  su  sal,  un  poco  menos 
de  tres  tazas  de  agua,  se  cuece  hasta  que  hace  totopos,  se 
coje  un  pedacito  delgado  y  se  pega  en  la  mano;  la  manteca 
ya  ha  de  estar  frita  y  luego  se  baja  y  se  va  deshaciendo  en 
manteca  templada  y  se  fríen. 

1,690.  Buñuelo*  de  maiaana,  chavaeanos  ó  duramos. — - 
Mondadas,  hechas  trozos  y  separados  los  huesos  6  pepitas, 
se  pondrán  las  manzanas  6  duraznos  en  aguardiente  catalán 
con  azúcar  molida  y  corteza  de  limoñ;  después  qué  se  hayan 
impregnado  bien  y  penetrado  del  aroma,  se  escurren  y  re- 
vuelcan en  harina;  se  fríen  los  trozos  hasta  que  están  bien 
dorados,  se  colocan  en  el  platón  y  se  polvorean  con  azúcar. 
Deben  emplearse  frutas,  que  no  están  bien  de  sazón,  sino 
algo  duras. 

1,631.  Buñuelos  de  horma  esponjado*. — A  un  cuartillo  de 
harina  un  cuartillo  de  leche  y  un  limón;  se  busca  harina  que 
no  está  dulce,  se  le  va  echando  la  leche  á  poquitos,  porque 
si  se  le  echa  mucha  á  un  tiempo  forma  muchas  bolas;  des- 
pués se  pone  á  calentar  en  un  poco  de  manteca  para  echarla 
en  el  fondo  de  la  sartén,  pues  se  cuecen  como  los  anteriores 
sin  dejar  de  menearlos  y  arrancando  las  costras  que  se  pe- 
guen á  la  sartén;  se  ponen  á  amasar  así  que  la  masa  está  co- 
cida. En  cuanto  se  pueden  cojer  con  la  mano  se  les  empieza 
á  echar  tinos  huevos  uno  por  uno;  ya  que  se  han  echado 
cuatro  ó  cinco  se  echan  los  demás  de  dos  en  dos  y  se  amasa 
muy  bien  para  que  no  quede  la  harina  abolada.    Se  le  echa 

14  OOO  INICUA  POBLANA.— TOM.  IL — 9„ 


126 

el  maíz  y  una  onza  de  azáoar  molida  en  polvo  para  que  sal- 
gan'enteros,  luego  ae  fríen  pero  antea  ae  dejan  reposar  on 
rato. 

1.632.  Buñuelos  dk  mantequilla. — A  una  libra  de  harina 
un  buen  trozo  de  mantequilla,  que  ae  ha  de  derretir;  ae  le 
agrega  un  poco  de  agua  de  anís  y  aal;  ae  amata  bien,  te  ex* 
tiende  después  la  masa  en  la  tabla  y  oon  la  boca  de  un  po- 
oillo  se  cortan  las  meditas;  se  fríen  en  manteca;  luego  se 
hace  almíbar  espesa  y  se  echan  en  ella  los  buñuelos. 

1.633.  Buñuelo*  de  mantequilla. — A  media  libra  de  hari- 
na ocho  6  dies  huevos  con  clara  y  yemas;  su  agua  de  anís, 
manteca  y  su  punta  de  sal;  m'uy  poca  levadura  que  se  ama* 
sa  bien  hasta  que  haga  ojos;  se  extiende  sobre  una  menta 
con  un  palote,  así  se  va  envolviendo  como  un  puro,  con  bas- 
tante mantequilla  extendida  sobre  la  mesa;  se  pone  á  ahor- 
car echa  canutos  en  unos  manteles;  y  así  que  estén  se  cortan 
con  cuchillo  can  a  ti  tos,  y  se  echan  á  freir  trocitos,  parados, 
cosa  que  con  el  palito  se  l«s  dé  su  cernidita  para  que  hagan 
bolitas,  y  así  se  pone  en  los  platos,  y  se  les  echa  su  almíbar 
con  canela  y  agua  de  azahar  con  la  almíbar. 

1.634.  Buñuelos  dé  recorte. — A  una  libra  de  harina,  dos 
huevos  menos  una  clara,  dos  mantequillas,  una  poca  de  sal, 
azúcar  molida  y  una  poca  de  manteca;  bien  amasado  esto 
comb  para  pastel,  con  un  palote  se  extiende  y  con  un  po- 
cilio se  cortarán  redondos  y  después  se  volteará  el  pocilio 
por  el  asiento;  se  cortan  á  que  queden  como  bizcocho  de 
mantequilla;  luego  se  fríen  en  manteca  y  se  ponen  en  un 
platón,  se  les  echa  almíbar  de  punto  y  canela  en  polvo. 

1.635.  JBufttiefoa.— -A  una  libra  de  harina  seis  huevos,  una 
poca  dé  manteca,  un  pedazo  de  levadura,  tantitoanís,  su  sal, 


127 

una  poca  de  almendra  molida;  se  golpea  en  un  metate  y  te 
hacen  los  buñuelos  muy  delgaditos. 

1,666.  Otros.  — Se  pone  ¿  cocer  la  harina  con  una. poqui- 
ta de  agua  de  anís  hasta  que  se  hace  un  engrudo,  se  le  echan 
después  huevos  hasta  que  quede  un  poquito  claro  y  se  fríe. 

1.637.  .  Otros  buñuelos. — A  dos  libras  dé  harina  se- pone 
á  cocer  una  poca  de  agua  de  anís,  y  se  vuelve  á  poner  á  la 
lumbre  en  un  cacito;  se  le  echa  una. cucharada  de  manteca 
y  hierve  hasta  que  ha  cocido  la  manteca;  se  baja  de  la  lum- 
bre y  se  le  revuelven  estas  dos  libra*  de  harina  hasta  que 
hace  una  poleada,  y  se  vuelve  á  poner  á  la  lumbre  y  se  cue- 
ce hasta  que  se  hace  pelota  y  se  despega  del  caso.  Se  baja 
de  la  lumbre  y  se  echa  en  una  batea  hasta  que  se  enfríe  co- 
sa que  aguante  la  mano;  entonces  se  le  van  incorporando 
de  dos  en  dos  los  huevos  con  claras  y  yemas  hasta  que  se 
pone  en  estado  de  cojer  una  bolita;  entonces  se  le  echa  su 
sal;  la  manteca  no  ha  de  estar  ni  caliente  ni  fría,  para  que 
tengan  lugar  de  esponjar  y  se  les  echa  almíbar. 

1.638.  Buñuelos. — A  una  libra  de  harina  seis  huevos  con 
claras  y  dos  bui  ellas,  lo  que  hace  un  huevo  de  levadura,  su 
anís,  tantita  sal,  una  mantequilla  y  un  plato  de  natillas,  en 
lugar  de  agua  leche;  el  punto  de  la  masa  ha  de  ser  suave  y 
no  se  pone  al  sol  sino  que  luego  se  fríen. 

1.639.  Buñuelos  de  camote, — Bien  cocidos  se  mulen  y  se 
echa  bastante  azdcar  y  canela;  se  revuelve  y  se  van  hacien- 
de como  tablillitas;  se  fríen  y  hacen  en  almíbar. 

1 .640.  Buñuelos  ojaldrados. — En  la  masa  como  de  las  ojue- 
las,  con  dos  yemas  de  huevo,  media  libra  de  harina,  agua 
fría  y  una  poquita  de  levadura  y  poca  manteca;  se  estiran 
como  hojuelas  y  untadas  en.  manteca  se  ponen,  unas  sobre 


138 

otaras,  hasta  veinte;  Ioego  te  enrollan  todos  junto*  y  te  de- 
jan on  pooo,  y  con  cuchillo  so  van  cortando  atravesados,  y 
con  la  mano  se  hacen  los  buñuelos  y  se  fríen. 

1.641.  Bufatelo*. — Se  baten  dos  huevos  y  se  les  revuelve 
una  libra  de  harina,  media  tasa  de  vino,  media  libra  de  man- 
teca derretida,  medio  pocilio  de  agua  de  anís,  una  poca  de 
agua  tibia,  se  revuelve  bien,  se  amasa,  se  extiende  con  el 
palote  y  se  fríen  después;  se  les  echa  sn  melado  por  encima. 

1.642.  Buñuelo*  de  calabaza. — Tlaco  de  calab%sa  cocida  y 
colorada  se  muele  con  lá  mitad  de  mamón;  se  baten  cuatro 
huevos  cocidos  y  allí  se  revuelve  y  se  van  friendo;  se  echan 
en  el  almíbar. 

1,648.  Buñuelos  de  jeringa. — En  medio  cuartillo  de  leche 
se  deshace  un  poco  mas  de  cuartilla  de  almidón,  se  cuela 
y  se  le  echa  tan  tito  anís  y  tantita  sal;  se  pone  A  cocer  hasta 
que  despega  del  caso  y  se  hace  bola,  se  aparta  á  que  se  en- 
frie, ya  frío  se  le  echan  doce  yemas,  y  so  deshacen  como 
quien  lava,  que  no  quede  tolondrón,  y  si  ha  de  menester 
mas  huevos.se  le  echan;  y  luego  se  echan  en  la  jeringa  y  se 
van  caracoleando,  y  luego  su  almíbar. 

1,644.  Otro$  dé  jeringa. — A  una  tasa  de  almidón  flor  dos 
de  leche,  en  asta  se  deshace  el  almidón,  se  le  echa  un  grano 
de  sal  y  tantito  anís  en  polvo;  se  revuelve,  secuela  en  ceda- 
so  y  se  pone  á  cocer. con  una  cucharada  de  manteca,  y  estan- 
do bien  oocida  se  apea  para  que  se  enfríe;'  se  le  echan  seis 
yemas  y  dos  claras,  se  revuelve  con  las  dos  manos  á  que  no 
le  queden  trocitos,  y  con  una  cuchara  se  va  echando  en  una 
Jeringa;  se  va  jeringando  en  la  manteca  templada;  para  que 
no  saque  oorason  se  sacan  y  se  van  mojando  en  un  caso  de 
almíbar;  ya  que  está  de  medio  punto  ó  que  dé*  dos  ó*  tres 


120 

hervores  ae  sacan  con  cuidado  con  un  palito,  y  en  los  pla- 
tones se  les  echa  almíbar  bien  espesa. 

1.645.  Otro*  de  jeringa.  — En  medio  cuartillo  de  leche  co- 
cida y  fría  se  deshace  media  libra  de  almidón  bueno,  secue- 
la con  un  cedazo  y  se  pone  á  cocer  en  un  cacito  meneándolo 
sin  cesar  con  una  cuchara,  y  así  que  empieza  á  cuajar  se  le 
echa  media  onza  de  manteca,  y  se  cuece  hasta  que  se  azota 
con  la  mano  y  no  se  pega;  se  apea,  se  echa  en  un  plato  y  se 
guarda,  á  otro  dia  se  le  echan  cinco  huevos  enteros,  y  otras 
cinco  yemas,  se  pasan  por  un  metate,  se  lucen  con  jeringa, 
se  echan  en  sartén  con  bastante  manteca  templada  que  que- 
den bien  doradas,  luego  se  pasan  por  almíbar  hirviendo;  ya 
que  están  en  el  platón  se  les  echa  azúcar  molida  y  almíbar. 

1.646.  Buñuelo*  de  almidón. — A  tres  tazas  de  almidón 
cernido  tres  de  leche;  se  pone  á  cocer  y  se  está  meneando 
hasta  que  está  de  punto,  el  que  se  toma  tocándole  y  si  no 
se  pega  en  los  dedos,  ya  está  bueno;  se  envuelve  en  una 
servilleta  mientras  se  baten  los  huevos;  á  cada  taza  seis  ye- 
mas y  una  clara,  se  baten  muy  bien  sin  que  les  quede  nin- 
gun  grumo;  se  fríen  á  fuego  manso  y  se  le  echa  el  almíbar 
y  grajea  por  encima. 

1.647.  Buñuelo*  de  almidón. — Se  remuele  el  almidón  y 
se  pasa  por  tamiz.  Se  miden  tres  tazas  de  leche  y  se  echan 
en  un  cazo  con  tres  tazas  de  almidón;  se  pone  á  cocer  y  se 
est  i  meneando  hasta  que  se  pone  de  modo  que  se  pueda  co- 
jer  con  la  mano  sin  pegarse.  Se  envuelve  la  masa  en  una 
servilleta.  Se  preparan  seis  yemas  de  huevo  y  uo¿  clara  por 
cada  taza  de  leche  y  se  baten  muy  bien;  cuando  ya  no  for- 
man espuma  se  incorporan  con  la  masa,  se  calienta  mante- 
ca, se  hacen  los  buñuelos  y  se  van  friendo  uno  por  uno;  á 


130 


fuego  manso,  se  bao*  almíbar  oon  olores  y  se  lea  va  echan- 
do con  grajea  por  encima. 

l,64tí.  Buñuelo*  de  Noche  buena. — A  tres  libras  de  harina 
doce  huevos  .con  claras,  poco  mas  de  un  cuartillo  de  pulque, 
un  poco  de  agua  hórrida  con  anís,  que  se  echa  á  la  harina 
con  todo  y  el  anís  que  se  coció;  se  deshace  tantita  levadura 
en  agua  tibia,  se  cuela,  se  le  echa  todo  junto  y  se  amasa  bien 
hasta  que  se  une;  después  se  azota  contra  el  metate  hasta 
que  esponja.  Se  unta  una  olla  oon  manteca  y  se  echa  la  ma- 
sa á  sudar;  en  despegando  de  la  olla  se  van  tomando  peda- 
citos  y  se  van  estirando  sobre  la  rodilla  en  una  servilleta 
hasta  que  tengan  el  tamaño'  necesario;  se  van  friendo  y  sa- 
cando con  un  palito  y  echando  en  el  almíbar  6  melado  con 
grajea. 

1,649.  Buñuelo*  de  molde. — A  una  libra  de  harina  veinti- 
dós huevos  oon  claras  y  yemas,  lo  que  cabe  en  tres  dedos 
de  sal,  una  oucharada  de  vino  Jeres,  un  pocilio  de  leche; 
todo  esto  se  echa  en  una  cazuela  hondita,  sé  bate  con  una 
cuchara  á  que  no  le  quede  grumo  ninguno;  la  manteca  que 
no  esté  muy  caliente;  para  que  salgan  finos  se  calienta  el 
fierro  en  la  manteca  y  se  moja  en  el  batidillo,  se  vuelve  á 
la  manteca  con  violencia  y  después  se  les  echa  almíbar  por 
encima. 

'  1,650.  Otros  de  molde. — A  veinte  yemas  dos  claras,  se  ba- 
te bien  junto  todo,  una  poquita  de  sal,  se  le  va  echando  la 
harina  poco  A  poco  y  se  va  batiendo  4  que  queden  suelteá- 
tos  como  los  de  arriba. 

1,661.  Buñuelo»  caseros. — Se  mezcla  harina  de  flor  con 
agua,  sal,  claras  de  huevo  batidas,  azúcar,  una  cucharada 
de  aceite  y  una  t5  dos  de  agua  de  flor  de  naranja;  se  deja  asi 


131 

hasta  que  esté  á  punto,  y  después  se  trabaja  la  masa  cuanto 
se  pueda.  Luego  se  echa  en  la  sartén  en  pellas  bien  delga- 
das, metiendo  por  en  medio  el  dedo  para  que  haga  un  agu- 
jerito.  £1  aceita  ha  de  estar  hirviendo,  y  cuando  están  tos- 
tados por  una  cara  se  vuelve  por  la  otra  hasta  que  tengan 
el  mismo  color.    Se  sirven  con  azúcar  6  miel  por  encima.. 

1.652.  Buñuelo»  con  frutas. — Se  cortan  en  cuatro  pedazos 
unas  manzanas,  se  les  deja  sin  cascara  ni  pepitas,  se  ponen 
por  tres  horas  en  aguardiente,  azúcar,  cascara  de  limón  ver- 
de y  agua  de  flor  de  naranja.  Ya  que  hayan  tomado  el  gus- 
to se  escurren  en  un  cedazo  ó  manga,  y  entre  tanto  se  hace 
una  pasta  compuesta  de  harina,  agua  tibia,  manteca  derre- 
tida,, dos  huevos  batidos,  que  quede  algo  espesa  para  rebo- 
zar bien  las  manzanas;  se  cubre  de  pasta  cada  pedazo  y  se 
f  rien  en  manteca  hirviendo  hasta  que  tome  un  color  dora- 
do, cubriéndolas  de  azúcar  según  se  sacan  y.  pasándolas  por 
encima  una  paleta  hecha  ascua.  Los  buñuelos  de  meloco- 
tones se  hacen  del  mismo  modo. 

1.653.  Buñuelo*  de  monja. — Se  ponen  en  una  cacerola  dos 
onzas  de  manteca,  cuatro  de  azúcar,  un  vaso  de  agua  y  cor- 
teza de  limón  raspada,  se  añade  harina,  y  se  hace  hervir 
hasta  qué  se  forme  una  pasta,  que  se  conocerá  que  está  en 
su  punto  cuando  se  desprenda  fácilmente  de  la  cacerola;  se 
mezclan  tres  huevos  y  sé  menea  todo  muy  bien.  Después  se 
extiende  sobre  un  plato  con  el  mango  de  una  cuchara  de 
cocina  y  se  corta  á  pedacitos,  que  se  echan  en  el  frito,  que 
no  debe  estar  muy  caliente  ,  se  escurren  en  una  servilleta  y 
se  sirven,  polvoreados  de  azúcar  fina. 

1.654.  Buñuelos  de  papas. — Se  cuecen  enteras  y  se  mon- 
dan, se  majan  y  se  hace  una  masa  espesita  conjeche,  agua 


13Í 

do  flor  de  naranja,  asacar  y  un  batido  de  yemas  de  huevo. 
Después  se  hacen  bolitas  y  se  fríen,  sirviéndolas  con  azúcar 
y  un  polvito  de  canela. 

1.656.  Bizcocho*  dé  qucto. — A  seis  libras  de  harina  se 
mezclan  doce  yemas  de  huevo  y  seis  claras,  una  libra  de 
azúcar  tamizada,  otra  de  queso  fresco  muy  remolido,  doce 
libras  y  media  de  manteca  y  se  amasa  todo;  si.  quedase  algo 
dura  se  le  echa  un  poco  de  agua  caliente  hasta  que  quede 
suave;  se  despolvorea  un  poco  do  harina  en  una  tabla  lim- 
pia, se  extiende  sobre  ella  la  masa  con  un  palote,  se  cortan 
los  bizcochos,  se  envuelven  uno  por  uno  en  un  papel  y  se 
llevan  al  horno. 

1,056.  Bizcocho*  de  anU. — Se  echan  en  una  tortera  doce 
yemas  de  huevo,  medio  cuartillo  de  agua  de  tequezquite, 
una  libra  de  manteca  y  la  cantidad  de  ante  que  se  coje  con 
tres  dedos;  se  revuelve  todo  esto  bien  y  con  violencia  y  se 
le  echan  dos  libras  de  harina  para  que  embeban  todo  el  ju- 
go. Ya  bien  amasado  todo  se  hacen  los  bizcochos  extendien- 
do la  masa  en  un  tablero,  se  cortan  como  cooolitos,  se  en- 
vuelven cada  uno  en  un  papel  y  se  ponen  en  el  horno. 

1.657.  Bizcochoé  de  huevo.— Se  baten  veinticuatro  yemas 
de  huevo,  hasta  que  hacen  ojos  muy  grandes,  y  en  ellas  se 
deshacen  con  los  dedos  tres  onzas  de  pan  de  birote  crudo, 
bien  molido  en  él  metate:  hecho  esto  con  una  cuchara  de 
palo  se  van  incorporando  las  cosas  que  siguen:  siete  onzas 
de  azúcar  molida,  tres  onzas  de  manteca  derretida,  dos  cu- 
charadas de  zumo  de  naranja,  un  poco  de  sal,  harina  flor, 
de  la  cual  se  puede  poner  hasta  una  libra:  poco  á  poco  se  va 
mezclando  hasta  que  la  masa  quede  suave,  pero  capaz  de 
labrarse,  se  tapa  y  se  deja  al  sereno;. al  siguiente  dia  se  la- 


133 

bran  los  bizcochos  y  se  van  colocando  en  papeles  untados 
de  manteca;  se  cuecen  en  horno  ouidando  que  sea  igual  el 
calor. 

1,668.  Bizcochos  de  Santa  Inés. — A  una  cuarta  de  harina 
una  libra  de  manteca,  libra  y  cuatro  onzas  de  azúcar,  diez 
yemas  y  sal  al  gusto;  se  revuelve  y  bate  mucho  con  las  ma- 
nos para  unirlo  y  que  esponje  bien;  luego  se  echa  la  man- 
teca y  se  revuelve  otra  vez. 

Después  de  esto  se  toma  un  puñado  de  levadura,  que  es 
lo  que  dan  por  medio,  y  se  le  echan  dos  puños  de  harina  y 
se  amasa  con  un  poco  de  agua.  Si  está  dura  luego  se  forma 
una  bola,  y  se  tapa  con  una  servilleta.  Se  deja  toda  la  no- 
che en  un  trasto  y  al  otro  dia  se  desbarata  la  levadura  con 
agua  á  que  quede  suelta  y  se  incorpora  con  todo  lo  demás 
con  un  poco  de  agua  y  se  vuelve  á  amasar  en  una  batea; 
luego  se  apuña  y  se  hace  con  la  masa  en  una  mesa  como  si 
se  lavara,  se  parte  en  pedazos  con  un  cuchillo  y  otra  vez  se 
ponen  en  la  batea;  se  vuelve  á  amasar  y  ya  unida  se  pone 
en  la  mesa  y  se  repite  la  operación  do  hacer  como  si  se  lava- 
ra, cosa  que  se  repite  cuatro  ó  cinco  veces  para  que  quede 
la  masa  muy  suave  y  blandita.  Se  deja  en  la  batea  hasta  el 
otro  dia,  en  que  se  apuña  otra  vez  y  se  amasa  dos  veces. 

Para  tenderla  se  pesan  seis  onzas  y  media,  se  amasan  y  se 
hacen  unos  palos  de  media  vara  de  largo  y  un  grueso  pro- 
porcionado, se  pone  en  una  tabla  que  tenga  por  encima  sal* 
vado  gordo  para  que  no  se  quemen  los  palos,  se  ponen  se- 
parados seis  dedos  uno  de  otra  por  lo  que  esponjan,  y  cuan- 
do ya  esponjaron  se  parten  por  el  medio  con  un  cuchillo;  en 
seguida  van  al  horno  que  no  está  caliente  como  para  el  pan 


134 

porque  se  queman.    Se  tacan,  se  enfrían  y  se  parten  delga- 
dos; luego  ae  vuelven  al  horno  para  que  te  abizoochen. 

1,669.  Bizcochos  de  mantequilla. — á.  una  libra  de  harina 
seis  yemas  de  huevo,  azúcar  en  polvo  al  gusto,  media  libra 
de  mantequilla;  se  amasa  todo  hasta  que  se  ponga  compac- 
to; se  extiende  con  el  palote,  se  hacen  los  bizcochos,  se  me- 
ten en  el  horno  y  al  sacarlos  se  les  echa  azúcar  en  polvo. 

1.660.  Bizcochos  de  chocolate. — Se  toman  seis  huevus  fres- 
cos y  se  parten  poniendo  las  yemas  en  una  cazuela  y  las  cla- 
ras en  otra,  fin  la  que  contiene  las  yemas  se  pone  onza  y 
media  de  chocolate  molido  en  polvo  muy  fino  y  un  polvo  de 
vainilla;  se  bate  todo  muy  bien  por  lo  menos  durante  un 
cuarto  de  hora,  luego  se  añaden  las  claras  bien  batidas  y 
cuando  ya  se  incorporaron  bien  se  añaden  seis  onzas  de  ha- 
rina, meneándola  siempre  para  que  se  mezcle.  Se  toman, 
los  bizcochos  y.  se  ponen  en  papeles  untados  de  mantequi- 
lla, se  les  ex  polvorea  azúcar  en  polvo  y  se  meten  al  horno. 

1.661.  Bizcocho*  de  naranja. — A  seis  libras  de  harina,  li- 
bra y  media  de  manteca,  tres  yemas  de  huevo,  un  pocilio 
de  zumo  de  naranja,  dulce  6  de  pifia,  lo  que  se  toma  en  tres 
dedos  de  sal  molida  y  media  libra  de  azúcar.  Se  revuelve  la 
harina,  la  sal  y  el  azúcar  en  un  cazó;  se  hace"  un  hoyo  en 
medio  de  la  masa  y  se  echa  la  manteca,  las  yemas  y  el  zumo 
de  naranja,  sejaraass  con  las  manos  y  se  sigue  revolvien- 
do con  la  harina;  si  se  pega  se  sigue  echando  harina  hasta 
formar  una  bola;  se  coloca  harina  en  la  mesa,  se  da  á  la  ma- 
sa la  forma  de  un  chorizon  y  se  van  cortando  rosquitas;  se 
envuelven  en  unos  papeles  y  se  echan  al  horno. 

Guando  se  sacan  ni  polvorean  oon  azúcar  y  canela  en  polvo. 

1.662.  Otros  de  naranja. — A*una  libra  de  harina, 


135 

de  manteca  cuatro  onzas  de  azúcar,  dos  yemas  de  huevo, 
un  poquito  de  sal,  el  zumo  de  dos  naranjas  dulces,  cinco  6 
seis  clavos  y  lo  que  se  coje  de  canela  con  tres  dedos.  Des- 
pués de  cocidos  se  le  echa  azúcar  por  encima. 

1,663.  Bizcochos  de  harina.Se  toma  una  libra  de  harina 
y  diez  yemas  de  huevo  cocidas  duras;  se  muelen  ambas  y  se 
les  revuelve  azúcar  molida  hasta  que  queda  la  masa  al  gus- 
to; luego  se  le  va  poniendo  poco  á  poco  manteca  hasta  que 
la  masa  quede  bien  compacta,  de  modo  que  se  pueda  adel- 
gazar mucho  con  las  palmas  de  las  manos;  no  se  le  puede 
echar  agua:  se  cortan  los  bizcochos  dándoles  la  foftna  que 
se  quiera  y  se  mandan  al  horno.  - 

1,663.  Otro»  bizcochos  de  harina. — A  tres  libras  de  harina, 
una  y  cuatro  onzas  de  manteca,  doce  yemas  de  huevo,  doce 
onzas  de  azúcar,  un  pocilio  de  vino  de  Jerez;  un  poco  de 
clavo  y  canela  molidos;  se  cortan  y  se  ponen  en  el  horno  y 
al  sacarlos  se  polvorean  con  azúcar  y  canela. 

1.665.  Mostachón**. — A  una  libra  de  azúcar  tamizada  diez 
yemas  y  cinco  claras,  treinta  clavos  molidos  j  una  libra  de 
harina;  se  echan  en  la  tortera  los  huevos,  se  revuelve  mu- 
cho él  azúcar  y  se  bate  con  las  manos;  se  echan  los  clavos 
muy  molidos;  cuando  la  masa  se  esponja  se  le  echa  la  hari- 
na, se  une  bien,  y  ya  que  está  consistente,  se  untan  las  pal- 
mas de  las  manos  con  manteca  y  se  van  haciendo  bolitas  de 
un  tamaño  regular  que  se  envuelven  en  un  papel  para  lle- 
varlos al  horno.  Cuándo  están  cocidos  se  les  quitan  los  pa- 
peles y  se  van  echando  en  una  olla  limpia  y  se  tapan  bien 
para  que  se  conserven  blancos. 

1.666.  Mostachones. — A  una  libra  de  azúcar  molida  y  ta- 
mizada, puesta  en  un  cazo,  se  le  echan  diez  huevos,  cinco 


156 

oon  clara;  se  bate,  7  cuando  ya  están  incorporados  te  le  agre- 
gan treinta  clavos  de  comer  6  mas,  segnn  el  guato,  7  han 
de  estar  muy  remolido»;  se  les  echa  después  una  libra  7  cua- 
tro onzas  de  harina,  se  vuelve  á  batir  agregándole  canela  en 
polvo,  que  puede  suprimirse  si  se  quiere;  se  forman  los  mos- 
tachones sobre  un  papel  y  se  meten  inmediatamente  al  hor- 
no templado. 

1.667.  Otros  mostachones — 8e  echan  en  un  caso  veinte 
yemas  de  huevo,  se  baten  como  chocolate  hasta  que  se.  unen 
muy  bien»  sé  echa  una  libra  y  cuatro  onzas  de  asnear  en  pol- 
vo, dostoucharadas  comunes  de  canela  y  una  de  clavo,  am- 
bas cosas  en  polvo;  todo  esto  se  inoorpora  con  las  yemas,  y 
se  sigue  batiendo  y  echando  harina  sin  parar  de  batir  hasta 
hacerse  una  masa  suave;  en  seguida  en  medios  pliegos  de 
papel  se  van  formado  los  mostachones  y  se  llevan  al  horno, 

1.668.  Mazapanes, — A  una  libra  de  asacar  clarificada  una 
de  almendra  remolida;  se  pone  á  hervir  dándole  el  punto 
de  melcocha.  Se  revuelve  la  almendra  oon  el  almíbar  y  se 
pone  en  la  lumbre  hasta  que  tome  el  punto  oon  la  mano  mo- 
jada y  si  ya  no  se  pega,  es  porque  ya  está.  Entonóse  se  apea 
de  la  lumbre  y  oon  la  mano  mojada  se  hacen  bolitas,  se  ra- 
yan oomo  chocolate  y  se  ponen  en  obleas.  Inmediatamente 
se  llevan  al  horno  6  se  ponen  en  una  sartén  con  su  tapade- 
ra. Así  que  han  tomado  el  color  del  pan,  se  quitan,  se  les 
despega  la  oblea  y  se  colocan  en  un  platón,  6  bien  se  coje 
almíbar  espesa  en  la  que  se  ponen  ruedas  de  limones  verdes; 
sobre  ellas  los  mazapanes,  y  estos  se  polvorean  con  asnear 
molida. 

1.669.  Otro  de  mazapanes. — Se  muele  una  libra  de  al- 
mendra untando  el  metate  con  una  6  dos  claras  de  huevo 


137 

batidas  paca  que  no  se  aceite.  Se  clarifica  una  libra  de  azú- 
car dándole  ponto  de  espejo,  allí  se  echa  la  almendra  y  cuan- 
do despega  del  cazo  se  aparta  y  se  deja  así  para  otro  dia  que 
se  ha&n  bolitas  con  las  manos  mojadas;  se  ponen  en  obleas 
y  se  aplastan  un  poquito  haciéndoles  una  cruz  con  un  cuchi- 
llo mojado  en  medio,  y  se  mandan  al  horno.  Si  uno  quiere 
embetunarlos  puede  hacerse  del  modo  siguiente: 

Se  clarifica  la  miel  dándole  punto  de  espejo  bien  alto  y 
se  le  raspan  unos  limones  verdes,  y  allí  se  están  metiendo 
y  sacando  loa  mazapanes,  y  se  Tan  poniendo  á  secar  en  un 
platón,  revolviéndoles  en  polvo  de  azúcar. 

1,670.  Chongo*  experimentados. — Se  clarifican  dos  libras 
de  azúcar  y  cuando  está  de  punto  regular,  se  aparta  y  se  le 
echan  oua  tro  onzas  de  mantequilla,  se  deja  enfriar  y  se  le 
agregan  «ocho  yemas  de  huevo  disueltas  en  poca  agua  y  co- 
lados por  una  pichancha.  Se  pone  de  nuevo  á  la  lumbre  pa- 
ra que  espese  un  poco,  se  empapan  unas  rebanadas  de  pan 
de  la  vida  y  se  colocan  en  un  platón,  se  polvorean  con  ca- 
nela molida  y  bastante  queso  rallado,  se  ponen  unos  trocitoa 
de  mantequilla  y  se  coloca  la  segunda  capa,  procurando  que 
quede  bien  cubierta  con  la  pasta  y  se  procede  como  en  1a 
anterior.  Se  le  pone  lumbre  por  encima:  después  que  enfria 
se  adorna  con  flores  de  mantequilla  exprimiéndolas  por'un 
ayate  fino.  Para  ponerlos  en  un  platón,  se  toman  con  un 
cuchillo. 

1,671*    Chongos  de  mi  compadre. — Se  rebana  el  pan  de  la. 
vida  delgadito,  se  fríe  en  mantequilla  hasta  que  se  dore,  se 
echa  en  el  almíbar  con  vino  y  canela  molida;  se  embarra  de 
mantequilla  una  cazuela  y  se  va  poniendo  una  capa  de  pan 
dorado  y  otra  capa  de  queso,  almendras,  pasas  y  nueces,  pi- 


188 


oado  todo,  y  sai  correspondientes  cacahuate*  y  piñones;  te 
le  echa  un  poco  de  almíbar  y  así  se  va  componiendo  "hasta 
echar  la  última  capa  de  huevo  batido,  y  se  pone  i  dos  fue- 
gos; para  que  no  se  queme,  se  le  va  echando  con  el  almíbar 
sin  perjudicar  la  capa  de  huevo  puesta;  se  va  levantando  por 
la  orilla  con  un  cuchillo  para  que  se  reconcentre. 

1 .672.  Chongo*  tapado* . — Cuatro  libras  de  azúcar  se  haoen 
almíbar  de  medio  punto,  se  echan  cuatro  mantequillas  de  á 
medio  yee  vuelve  á  ponera]  fuego  para  que  suban  de  punto, 
luego  se  baja  á  que  se  enfríe;  se  baten  dies  y  seis  huevos  y 
al  echarlos  se  bate  el  almíbar  oomo  turrón;  se  rebanan  cua- 
tro reales  de  pan  de  la  vida  y  se  fríen  en  manteca  y  mante- 
quilla, se  ponen  en  una  tortera,  se  le  va  echando  almíbar 
con  huevo,  mucha  canela  y  queso  rebanado,  pero  que  no 
este*  salado,  y  así  se  van  poniendo  las  capas  hasta  la  última 
que  esté  mas  empapada  de  almíbar;  se  le  echa  su  azúcar  y 
canela  por  encima,  .pero  antes  de  todo  se  unta  la  tortera  de 
mantequilla  y  se  pone  á  dos  fuegos  lentos;  se  le  mete  un 
popote  para  ver  si  está  cocida  y  cuajada. 

1.673.  Muéganoé  de  Sania  Inés, — Tres  libras  de  azúcar, 
una  panela  y  medio  cuartillo  de  miel  virgen  todo  se  pone  ¿ 
clarificar,  se  cuela  y  se  vuelve  á  la  lumbre  hasta  que  tome 
punto  que  se  le  dá  en  agua  cuando  hace  bolita  suave;  á  una 
libra  de  harina  treinta  yemas  de  huevo  sin  nada  de  claras, 
se  le  echa  un  cascaron  de  vino  Jerez»  otro  de  agua  de  anís 
y  medio  cascaron  de  agua  de  tequesquite,  un  polvo  de  sal 
y  todo  se  revuelve  con  las  manos;  y,  con  un  pedacito  se  ha- 
ce la  experiencia  en  la  manteca  á  ver  si  esponja,  y  si  no  se 
le  echa  mas  de  todo,  menos  de  huevo,  se  hacen  unos*  pali- 
tos no  muy  gordos  ni  muy  delgados;  se  dejan  orear  y  lúe- 


139 

go  se  fríen  en  manteca;  ya  que  están  todos  se  echan  en  el 
almíbar  caliente  y  se  menean  hasta  que  empanizan  bien;  se 
apea  y  en  una  tabla  húmeda  se  le  echa  un  poco  de  ajonjolí 
y  allí  se  vacia  el  cazo,  con  la  cuchara  se  aprieta  á  que  quede 
del  alto  que  se  quiera;  luego  se  cortan  como  uno  quiera; 
cuando  se  está  empanizando  se  recia  con  agua. 

1.674.  Molletes  reventones. — Se  echa  en  un  lebrillo  una 
libra  de  levadura  fresca,  dos  onzas  de  manteca  fría  y  una 
taza  de  agua  bien  tibia;  se  deshace  'con  la  palma  de  la  ma- 
no hasta  que  se  amasa  bien;  se  echan  en  una  olla  bastantes 
huevos  y  se  bate  con  un  molinillo  hasta  que  incorporan 
bien  las  claras  con  las  yemas:  se  echan  en  el  lebrillo  donde 
está  la  levadura  y  se  vuelve  á  menear  un  poco  con  la  palma 
de  la  mano:  se  echan  allí  nueve  onzas  de  azúcar  bien  remo- 
lida y  tres  libras  y  media  de  harina,  que  es  bueno  la  eche 
una  persona  mientras  otra  menea  y  revuelve  bien.  Así  que 
está  bien  incorporado  todo  se  golpea  bien  la  masa.  Cuando 
despega  de  las  manos  y  del  trasto  en  que  se  amasó,  se  echa 
en  un  lebrillo,  se  tapa  con  un  mantel  y  se  pone  en  uno  de 
los  lados  del  brasero.  A  otro  día  se  hacen  los  molletes  pe- 
sándolos de  á  onza  y  poniéndolos  en  unas  latas  untadas  de 
manteca;  se  vuelven  á* tapar  y  á  las  tres  horas  se  mete  al 
horno  templado. 

1.675.  Molletes  de  frijol  blanco. — Después  de  bien  cocidos 
y  lavados  se  muelen  con  canela  y  pimienta,  se  baten  en  una 
cazuela  con  un  pocilio  de  leche  y  dos  yemas  de  huevo,  su 
dulce  competente  y  después  de  batidos  se  pone  en  una  ca- 
zuela con  bastante  manteca  y  con  una  cuchara  se  va  echan- 
do hasta  que  se  doren;  se  fríen  hasta  qqe  se  revientan,  se 


140 

sacan  y  van  poniendo  en  #1  platón  eon  su  almíbar;  se  ador- 
nan con  paiM  y  almendras  y  ana  rociada  de  vino  por  encuna. 

1.676.  Bigote*  de  atoo*. — Después  de  lavado  el  arroz  en 
dos  6  tres  aguas,  de  modo  que  no  se  desquebraje,  se  pone 
en  leche  con  ana  poquito  de  sal  6 na;  después  se  le  agrega 
almíbar  de  asacar  blanca  bien  clarificada  hasta  que  cueza 
bien  el  arroz;  ya  cocido,  se  deja  consumir  hasta  que  espese 
mucho,  se  echa  en  un  platón,  y  al  dia  siguiente  se  loman 
porciones  de  este  arroz  y  se  forman  las  figuras  que  uno 
quiere;  se  revuelcan  en  harina,  después  se  fríen  en  manteca 
hasta*  que  ha  dorado  la  tes  y  se  espolvorea  sobre  ellas,  asa- 
car y  canela  en  polvo;  se  ponen  en  un  platón  sobre  hojas 
de  naranja  y  se  cubren  con  otras. 

1.677.  Otra»  bigote»  de  arroz. — Se  pone  á  cocer  arros  con 
azúcar  á  que  se  endulce  bieu,  procurando  que  quede  cocido, 
pero  entero;  se  pone  en  una  oanastita  limpia  á  que  escurra  y 
no  le  quede  agua.  Hecho  esto  se  hacen  unos  metlaptles  co- 
mo oamotitos,  que  queden  apretaditos;  se  revuelcan  en  biz- 
cocho tostado;  se  baten  unos  huevos  con  claras,  se  revuelven 
con  ellos  los  metlapiles  y  se  van  friendo  en  manteca.  Se  pol- 
vorean con  azúcar  y  canela. 

1.678.  Boüo*.  —Puesta  sobre  una  tabla  libra  y  media  de 
harina,  mézclase  con  media  onza  de  manteca,  un  poco  de  ha- 
rina y  agua  tibia;  se  forma  una  pasta  consistente,  que  se  do- 
bla sobré  ella  misma,  añadiéndole  á  esta  pasta  media  libra 
de  harina,  media  onza.de  sal,  media  libra  de  manteca  y  seis 
huevos;  uniéndolo  todo  á  la  pasta  fermentada;  se  vuelve,  á 
amasar,  dejándola  reposar  por  diez  horas,  y  con  ella  se  ha- 
cen los  bollos. 

1.679.  Bollo*  de  flor  de  naranja* — Se  hacen  como  los  sopli- 


141 

líos  de  rosa,  con  la  diferencia  que  se  eohaagua  de  flor  de  na- 
ranja; se  pueden  hacer  también  de  azafrán,  anís  y  canela, 

1.680.  BoUitos  de  calabaza. — A  una  taza  de  plátano  moli- 
do y  cocido  igual  cantidad  de  calabaza  bien  seca  y  cocida,  y 
á  d<«s  tazas  de  pasta  una  de  masa  remolida;  se  une  y  se  le 
echa  un  poco  de  anís  despolvoreado,  se  hacen  los  bollitos  y 
se  fríen  en  manteca  y  al  servirlos  se  les  pone  un  polvo  de 
azúcar. 

1.681.  BoUitos  de  elote. — Se  toman  los  elotes  y  se  muelen, 
se  les  echa  azúcar,  manteca  y  anís  al  gusto,  se  revuelve  para 
que  una,  se  hacen  los  tamalítos  y  se  cuecen  como  todos:  los 
huesos  de  elote  se  ponen  al  fondo  de  la  olla  y  encima  unas 
hojas,  se  echa  agua  hasta  que  se  cubra,  y  se  van  colocando 
los  tamales,  tapando  la  boca  de  la  olla  hasta  que  se  cuezan. 

1.682.  Croquetas  de  arroz.  — Se  pone  en  agua  un  cuarterón 
de  arroz  hasta  que  se  abra,  y  se  prepara  como  hemos  dicho 
de  la  torta  de  arroz;  pero  en  vez  de  ponerle  en  un  molde,  se 
hacen  bolitas  6  rollitos,  que  se  bailan  en  huevo  batido  y  azú- 
car; después  se  empanan  y  se  vuelven  á  meter  en  el  hue- 
vo, se- pasan  segunda  vez  por  el  huevo  y  se  fríen  bien,  sir- 
viéndose bien  calientes. 

1.683.  Croquetas  de  confituras. — Se  hará  un  poco  de  pasta 
en  hojas  y  ae  cortará  en  dos  pedazos  redondos;  se  colocará 
en  cada  una  el  grueso  de  una  avellana  de  mermelada  de  cha- 
bacanos; mojados  y  doblados  los  bordes,  se  colocarán  sobre 
una  cobertera  de  cacerola,  desde  donde  se  deslizarán  á  la 
fritura,  cuando  estén  doradas  se  expolvorean  con  azúcar  y 
se  retiran. 

1.684.  Soplillo*. — Tómense  :cuatro  cucharadas  de  fécula 
de  papas  v  deslíense  en  un  cuartillo  de  nata,  añadiendo  cua- 

LA  COCINERA  POBLANA. — T01C.   II — 10. 


143 

tro  onzas  de  azúcar,  cuatro  de  manteca,  corteza  de  limón 
raspada  y  cuatro  yemas  de  hueros.  Se  hace  hervir  todo  es- 
to hasta  que  tome  consistencia,  retirándolo  después  del  fue- 
go y  dejándolo  enfriar,  se  mezclan  de  nuevo  otras  seis  ye- 
mas de  huevo  y  cuatro  claras  bien  batidas;  se  toman  peda- 
citos  de  esta  masa  y  se  ponen  en  un  papel,  separados  unos 
de  otros;  se  coloca  encima  de  ceniza  muy  caliente  una  plan- 
cheta delgada  de  hierro,  y  se  sirven  inmediatamente  que 
empiecen  á  subir.  Se  pueden  también  hacer  con  crema  de 
arroz,  de  miga  de  pan,  etc. ;  y  en  cuanto  al  gusto  que  se  les 
quiera  dar,  se  puede  elegir  la  canela,  la  vainilla,  el  limón, 
la  naranja,  etc. 

1.685.  Soplillo  efe  orroz.—  Móndese  media  libra  de  arroz 
-y  cuezase  con  nata,  azúcar  y  un  poco  de  sal:  estando  bien 

cocido  pásese  por  el  tamiz,  coloqúese  este  puré  en  una  ca- 
cerola con  seis  yemas  de  huevo,  un  poco  de  flor  de  naran- 
ja, corteza  de  limón  con  un  poquito  de  manteca,  añádanse 
seis  claras  batidas  con  nieve.  Hágase  calentar  al  horno  de 
campana,  úntese  de  manteca  un  molde,  cuyos  bordes  se  guar- 
necerán con  una  faja  de  pa^el  para  sostener  el  soplillo  cuan- 
do suba.  Se  vaciará  en  él  la  composición,  y  se  colocará  so- 
bre la  ceniza  encendida.  El  horno  debe  tener  un  calor  mo- 
derado. 

1.686.  Soplillo  de  papas. — Se  hace  como  el  de  arroz:  cua- 
tro onzas  de  fécula,  un  cuartillo  de  nata  y  seis  huevos. 

1.687.  Soplillo  cíe  diocolate. — Tómese  un  cuartillo  de  le- 
che y  tres  onzas  de  chocolate,  una  cucharada  de  fécula  de 
pa¡tas  y  cuatro  huevos  frescos;  hágase  cocer  él  chocolate  en 
la  leche,  añádase  la  fácula,  hágase  cocer  durante  tres  minu- 
tos, y  cuando  la  materia  esté*  bastante  enfriada  para  que  no 


148 

puedan  cocer  los  huevos,  agregúense  las  yemas  bien  batidas; 
por  otra  parte  bátanse  las  claras  de  los.  mismos  huevos  has- 
ta que  estén  un  poco  firmes,  y  mézcleselas  con  todo,  y  des- 
pués se  derrama  en  un  molde  bien  preparado,  que  se  habrá 
hecho  calentar  después  de  haberlo  untado  muy  bien  con 
mantequilla;  póngase  á  dos  fuegos  y  sírvase  en  el  molde  sin 
perder  un  instante. 

Con  semejante  papilla  se  hacen  soplillos  de  macarrones, 
poniéndolos  hechos  pedazos.  Del  mismo  modo  se  ejecuta 
con  los  chabacanos  ú  otras  fru  ¡as,  añadiendo  la  mermelada; 
con  el  café  haciéndoles  cocer  con  el  café  tostado;  en  la  crema, 
antes  de  añadir  la  fécula,  con'  flor  de  naranja,  etc. 

1,683.  Soplillos  de  rosa. — Bátanse  tres  libras  de  azúcar 
en  polvo  con  dos  claras  de  huevo,  añadiendo  poco  á  poco  una 
onza  de  agua  de  flor  de  naranja  y  un  poco  de  carmín  en  pol- 
vo; de  todo  esto  se  hace  una  pasta  consistente  y  bastante 
Arme,  que  se  hará  rodar  sobre  una  tabla  empolvada  de  azú- 
car; se  cortan  trocitos  como  avellanas  y  se  ponen  en  hojas 
de  papel  á  seis  líneas  de  distancia  para  que  ño  se  toquen; 
así  se  ponen  al  horno  hasta  que  se  levanten.  Lo  mismo  se 
hacen  los  soplillos  de  flor  de  naranja,  azafrán,  anís,  canela 
y  violetas. 

1,689.  Pronto  Hecho. — Deslíense  huevos  enteros  en  hari- 
na, de  modo  que  se  haga  una  pasta  espesa,  que  se  desleirá 
luego  hasta  que  adquiera  la  consistencia  de  papilla  con  le- 
che, azúcar,  agua  de  flor  de  naranja,  vainilla,  corteza  de  li- 
món ú  otro  perfume  á  elección;  úntese  de  manteca  una  tor- 
tera y  viértase  en  ella  esta  papilla,  que  se  hará  cocer  pron- 
tamente sobre  un  fuego  vivo  y  bajo  el  horno  dé  campaba* 
Esta  pasta  subirá  como  una  tortilla  soplada. 


144 

1,090.  8n*piro$  de  monje*.  —Póngase  en  ana  enceróla  dos 
cuartillos  de  agua,  an  poco  de  azúcar,  un  pedacito  de  man- 
teca 7  cortesa  de  limón;  hágase  cocer  el  agua  hasta  que  ha- 
ya tomado  el  olor  de  limón.  Quítese  el  limón,  póngase  en 
el  agua  gran  cantidad  de  harina  con  ana,  mano,  mientras 
que  con  la  otra  se  está  meneando  todo  con  una  cuchara;  con- 
tinúese ex  polvoreando  hasta  que  la  masa  llegue  á  hacerse 
sumamente  espesa,  y  sígase  meneando  hasta  que  este*  ente- 
ramente cocida,  lo  que  se  conoce  cuando  probándola ..  no  se 
le  percibe  el  gusto  de  la  harina.  8e  necesita  al  menos  un* 
media  hora,  y  cuanto  mas  cocida  está  es  mas  ligera.  La  ma- 
sa no  se  quemará  si  se  tiene  siempre  cuidado  de  menearla. 
Retíresela  del  fuego,  áchese  un  huevo  en  ella  y  continúese 
meneándola  hasta  que  se  incorpore  á  la  pasta;  añádase  otro 
en  seguida,  y  así  sucesivamente  hasta  que  sea  manejable, 
batiendo  y  meneando  siempre.  Tómese  en  seguida  con  el 
mango  de  una  cuchara  gruesa,  ooroo  una  pequeña  núes,  qpe 
se  hará  caer  en  el  frito  por  medio  de  un  sacudimiento  fuer- 
te en  el  bordo  de  la  sartén. 

Esta  pasta  se  hincha,  y  e?  interior  queda  vacio. 

1.691.  Mwtpira*. — Veinticinco  yemas  de  huevos,  azúcar 
la  que  aguante  molida,  se  le  echa  y  se  bate  hasta  que  espe- 
sa,' ya  que  se  van  á  echar  se  le  echa  medio  de  canela  bien 
molida,  un  poco  de  claro  molido  y  se  meten  al  horno  tem- 
plado que  tenga  mas  suelo  que  cielo. 

1 .692.  Picatosto  de  durazno.  — Úntese  con  manteca  el  fon. 
do  de  una  tortera  ó  de  un  platón  que  resista  al  fuego;  cór- 
tense rebanadas  de  pan  lo  mas  ancho  posible  y  de  la  longi- 
tud de  la  tortera  ó  platón;  coloqúense  las  rebanadas  en  el 
fondo  de  la  tortera  de  modo  que  la  cubran;  tómense  duraz- 


145 

nos  muy  maduros,  y  abriéndolos  por  la  mitad,  cúbranse  con 
ellos  las  rebanadas  de  pan,  pero  colocando  la  parte  del  pe- 
llejo tocando  al  pan,  y  lo  interior  de  la  fruta  hacia  arriba  y 
al  descubierto.  Póngase  en  cada  mitad  del  durazno  azúcar 
fina  y  un  pedazo  de  mantequilla;  en  seguida  póngase  á  dos 
fuegos  lentos  la  tortera.  Es  necesario  que  haya  mas  fuego 
arriba  que  abajo,  ouidando  de  renovarse  las  veces  que  fue- 
se menester;  así  se  expolvorean  muchas  Teces  con  azúcar 
los  duraznos,  respecto  á  que  esta  fruta  es  muy  acida;  coci- 
dos que  sean,  sírvanse  ligeramente  los  picatostes,  sirviéndo- 
les en  un  platón,  del  mismo  modo  qtie  estaban  en  la  torte- 
ra, evitando  el  que  se  peguen.  Debe  igualmente  rociárseles 
con  el  jugo  que  se  encuentre  en  el  fondo  de  la  tortera,  y  ca- 
lientes se  servirán.       * 

Igualmente  pueden  hacerse  por  el  proceder  indicado,  pi- 
catostes de  capulines  y  chabacanos. 

1.693.  Turco  dé  maíz. — Refregado  y  despuntado  el  nitzta- 
mal,  se  pondrá  á  que  se  seque  al  sol,  y  ya  seco  se  molerá  y 
después  se  cierne  por  cedazo  floreador,  y  á  dos  platos  me- 
dianos de  harina  doce  yemas  de  huevo  crudas,  azúcar  al  gus- 
to, una  poquita  de  agua  de  anís,  y  manteca  toda  la  que  se 
necesite  á  quedar  en  buena  disposición,  y  estando  bien  ba- 
tida, y  de  modo  de  poderse  moler,  se  sacarán  los  pacholes, 
y  en  todo  lo  demás  se  hará  como  el  anterior.  Otro  se  hace 
lo  mismo;  pero  con  yemas  cocidas,  molidas  y  á  proporción 
de  la  harina,  procurando  que  quede  de  buen  gusto. 

1 .694.  Turco  de  bizcocho.  — Molidos  los  bizcochos  de  huevo 
que  sean  fritos  se  incorporan  con  huovos  batidos,  los  preci- 
aos á  que  se  pueda  moler  la  masa;  se  le  echará  canela  moli- 
da y  azúcar  al  gusto,  se  suavizará  con  manteca  j  ya  que  es- 


146 

te*  en  buena  disposición  'te  molerá,  y  estando  remolida  tesa- 
oarán  loe  pacholes»  y  se  concluirá  «orno  loe  anteriores. 

1,605.  Turco  de  amos. — Se  lavará  bien,  7  se  pondrá  al  sol 
á  que  seque,  así  que  está  se  molerá,  y  cernido  por  tamil  se 
hará  una  masa  suave  oon  manteca  y  azúcar  de  modo  que  se 
pueda  moler  y  concluirá  en  todo  lo  demás  como  los  ante- 
riores, 

1,609.  Turco  de  garbanzo. — Pelados  con  cenia,  se  lava- 
rán bien,  y  se  cocerán  en  agua  y  sal,  y  cuando  estén  cocidos 
y  escurridos  se  molerán  con  una  tercera  parte  de  yemas  co- 
cidas, clavos  y  pimienta  al -gusto,  y  de  ello  se  hará  con  man- 
teca una  masa  capas  de  molerse,  y  en  todo  lo  demás  será 
como  los  anteriores.  . 

Estos  tres  últimos  pueden  servir  también  para  alguna  pas- 
ta 6  leche,  y  entonces  en  lugar  de  manteca  será  mantequi- 
lla, y  se  le  agrega  canela  en  polvo  mezclada  con  el  azúcar, 
y  otros  adornos  de  las  mismos  masas. 

1  ,G97.  Turco  de  mana  de  tamalee  cernidos.  — Hechos  los  ta- 
males sin  ningún  relleno,  sino  solo  de  masa  oomo  es  corrien- 
te, se  dejarán  hasta  el  siguiente  dia,  que  molida  con  yemas 
cocidas  se  mes»  lará  con  azúcar  al  gusto,  canela  y  clavo,  y  en 
estando  bien  remolida  se  sacarán  los  pacholes,  y  en  todo  lo 
demás  será  como  los  otros. 

1,<»98.  Croquetas  de  maíz.  — Se  toman  cuatro  libras  de  azú- 
car molida,  dos  libras  de  harina  de  maíz,  dos  de  harina  de 
trigo,  dos  libras  de  agua  de  flor  de  limón  6  de  naranja,  y  se 
muele  hasta  que  toma  consistencia  de  masa;  se  extiende  con 
un  palote  hasta  dejarla  delgada  y  se  corta  en  pedazos  según 
la  6gura  que  se  quiera.  Se  ;x>aen  en  una  tortera  y  se  cuecen 
á  dos  fuegos  lentos;  ya  oocidos  se  polvorean  con  azúcar. 


147 

1.699.  Croqueta*  de  arroz. — Se  escalda  y  cuece  en  leohe 
una  libra  de  arroz,  al  que  se  irá  agregando  leche  á  medid» 
que  espese:  se  le  echa  un  poco  de  corteza  de  limón,  un  poco 
de  vainilla,  azúcar  al  gusto  y  un  poco  de  sal'.  Cuando  el  ar- 
roz ha  reventado  bien  se  retira  del  fuego  y  se  saca  la  corte- 
sa de  limón  y  la  vainilla;  se  echan  ocho  ó  diez  yemas  de  hue- 
vo y  se  baten  aparte  las  claras;  se  mezclan  después  de  bati- 
das con  agua  de  flor  de  naranja  y  se  mezcla  todo  muy  bien: 
se  hacen  unos  batidos  que  se  bañan  en  huevo  batido  y  azú- 
car y  después  se  polvorean  con  pan  rallado.  Esta  última  ope- 
ración se  hace  dos  veces  y  después  se  frien. 

1.700.  Migas  de  San  Jerónimo. — Se  remoja  una  torta  de 
pan  frió  y  después  se  exprime;  luego  se  le  hace  embeber  po- 
co á  poco  media  libia  de  manteca  y  cuatro  bizcochos  marta- 
jados,  azúcar  y  canela  en  polvo,  y  conforme  va  enjugando 
se  rocia  con  vino  tinto:  deben  quedar  jugosas;  se  les  echa 
ajonjolí  tostado,  pasas  y  almendras. 

1.701.  Migas  de  Jesús  Marta. — Se  ponen  á  hervir  cebo- 
llas con  agua  suficiente  según  el  tanto  de  migas  que  se  quie- 
re hacer;  con  las  cebollas  se  hierve  también  una  r«mita  de 
yerbabuena;  cuando  ambas  cosas  han  hervido  bien,  se  sacan 
y  se  echa  al  agua  la  sal  correspondiente,  bastante  azúcar, 
pan  frío  desleído  y  remojado,  canela,  clavo  y  azafrán,  todo 
tostado.  Al  apearlas  de  la  lumbre  se  les  añade  nn  poco  de 
vino  tinto,  pasas,  almendras,  piñones  y  nuez. 

1.702.  Bizcochos  de  Santa  Inés.— A  tres  libras  de  harina, 
media  de  azúcar  molida  y  tamizada,  cinco  huevos,  dos  con 
clara  y  tres  sin  ella,  una  libra  de  manteca  y  una  taza  de 
agua  de  tequesquite  asentado.  Se  bate  todo  para  que  incor- 
pore, se  le  revuelve  la  harina  y  se  amasa.    Se  extiende  con 


148 

el  palote  7  ae  corten  los  bizcochos  oon  molde  de  hoja  de  le* 
te:  luego  ee  lleven  el  horno. 

1.703.  Otros  biaeocho*. — A  doe  libree  de  harina  una  de 
manteca,  media  libra  de.azúcar,  doe  onzas  de  almidón  de 
trigo  cernido,  un  cuartillo  de  leche  y  una  poca  de  agua  de 
azahar;  ee  amata  muy  bien  con  ocho  yemas  de  huero  y  lera- 
dura;  conforme  ai  tiempo  ee  pueden  rebajar  cuatro  onzas 
de  manteca  y  echárselas  de  mantequilla. 

1.704,  JBcüot. — A  libra  y  media  de  harina  doe  onzas  de 
manteca  y  media  de  azúcar;  se  amasa  para  que  incorpore  y 
se  extiende  con  el  palote;  se  cortan  con  molde  las  figuras  y 
se  mandan  al  horno. 

1,706.  Rodeo  Jííw.  -A  dos  libras  de  harina  una  de  man- 
teca, cinco  yemas  de  huero,  una  taza  de  agua  de  sal  y  me- 
dia libra  de  azúcar.  Se  baten  el  azúcar  y  las  yemas  con  la 
manteca  y  se  baten  mucho;  se  les  echa  el  agua  de  sal  y  se 
sigue  batiendo^hasta  que  esponje  y  haga  ojos;  entonces  se 
lebeche  harina,  se  coloca  la  masa  en  una  tabla  sobre  un 
papel  y  se  palotea.  Se  forman  los  bizcochos  oon  un  molde, 
se  pican  con  unas  tenazas  y  se  envuelven  en  unos  papelee 
para  llevarlos  el  horno. 

1 ,706.  Bodeo  de  aguardiente.  —A  una  libra  de  harina,  vein- 
tiuna yemas  de  huevo,  un  poco  de  agua  de  anís  y  lo.  que  se 
coje  oon  tres  dedos  de  sal  molida.  Se  hace  una  especie  de 
cajetito  con  la  harina  sobre  una  tabla,  se  le  abre  un  hoyo  en 
medio  y  se  echan  en  el  las  yemas;  se  amasa  con  las  manos 
untadas  de  manteca  para  que  la  masa  no  se  pegue  y  se  le 
van  echando  de  dos  en  dos  dedales  de  agua  de  tequesquite. 
Se  sigue  amasando  y  echándole  un  poco  de  aguardiente  ca- 
talán hasta  que  quede  suave.    Se  golpea  en  la  mesa,  se  pe- 


140 

lotea  y  se  van  cortando  pedazos  y  pegando  las  orillas  en  for- 
ma de  gaznates  con  clara  de  huevo;  se  pican  con  las  tenaci- 
tas  y  se  van  friendo  en  manteca;  con  un  palito  se  les  da 
de  vueltas,  y  así  que  están  doraditns  se  revuelcan  en  azú- 
car y  canela. 

1.707.  MuéganoB. — A  media  cuarta  de  harina  se  añade 
una  libra  de  manteca  derretida  en  una  cazuela.  Se  deshacen 
dos  yemas  de  huevo  y  se  le  incorpora  la  harina  y  se  le  va 
mezclando  la  manteca.  Se  pone  la  cantidad  de  tequezquite 
que  se  coje  con  cuatro  dedos,  en  una  taza  de  agua  bien  ca- 
liente; ya  que  está  amasada  se  echa  á  la  masa  y  se  vuelve  á 
amasar  como  quien  lava  ropa.  Después  se  hacen  unos  bollos 
largos  y  delgados  del  grueso  de  un  dedo,  se  parten  en  pe- 
da sitos  con  un  cuchillo.  Se  cuecen  en  el  horno  dos  panelas, 
se  echan  en  una  taza  de  agua,  se  ponen  en  la  lumbre  y  ya 
que  están  desbaratadas  y  rompe  el  hervor  se  apean  de  la 
lumbre,  se  echan  allí  las  bolitas  y  se  van  formando  los  mué- 
ganos. 

1.708.  Muéganos  poblanos — Se  echa  en  una  cazuela  una 
libra  de  harina  y  treinta  yemas  de  huevo,  lo  que  se  coje  con 
tres  dedos  de  anís  en  polvo,  medio  pocilio  de  agua  de  te- 
quesquite  asentada  y  tres  cucharadas  de  aguardiente;  se 
amasa  y  si  queda  suelta  se  le  agrega  harina  hasta  que  no  se 
pegue  en  la  mano;  se  golpea  mucho  en  un  metate  y  se  van 
haciendo  unos  cerillos  largos  que  se  enredan  en  la  mano  y 
se  frien  en  manteca,  (los  cerillo*  se  hacen  en  una  mesa);  se 
hace  almíbar  con  tres  libras  de  azúcar  y  libra  y  media  de 
panocha;  se  le  da  punto  de  espejo  alto  y  se  bate  hasta  que 
empanice;  se  rocían  los  cerillos  con  vino  Jerez,  se  echan  en 
la  miel  empanizada,  se  ponen  en  cajonee  menudos  y  se  apríe- 


160 

Un  poniéndoles  una  servilleta  húmeda  encima,  para  alisarlos 
y  ae  cortan  en  cuarteronctbo*  antee  que  ae  enduresoan,  sin 
sacarlos  del  cajón.  - 

1.709.  Pucha*  de  tierra  adentro.— A  treinta  hueros  como 
para  freír,  batidos,  primer»)  las  claras  y  después  las  yemas, 
se  les  echa  un  poquito  de  anh  y  sal  molida,  una  tara  de 
manteca  bien  caliente;  una  persona  va  echando  la  manteca 
y  otra-va  revolviendo  con  la  mano,  y  se  va  echando  harina 
la  que  hubiere  menester,  se  va  revolviendo  á  que  no  quede 
la  masa. dura;  después  do  hechas  se  cuecen  en  agua  simple- 
mente; se  van  sacando  y  así  que  están  bien  secas  se  meten 
al  horno,  no  muy  caliente. 

1.710.  Bolovane*.  —Se  revuelve,  amasa  y  palotea  una  li- 
bra de  harina  con  un  poco  de  agua  de  sal;  cuando  esté* bien 
extendida  se  lo  pone  en  medio  una  libra  de  mantequilla  y 
se  dobla  la  masa  cubriéndola  bien;  después  se  vuelve  á  pa- 
lotear despacio,  procurando,  si  revienta  la  masa,  cubrirla 
con  harina;  después  de  doblarla  y '  palotearla  varias  veces' 
se  extiende  á  dejarla  del  grueso  de  un  peso,  y  con  una  co- 
pa se  van  cortando  ruedas. 

Se  hace  el  picadillo  con  carne  de  puerco  guisad»  y  frita 
en  crudo,  con  bastante  ajo  menudo,  cebolla,  pimienta,  sal  y 
núes  moscada.  Se  ya  poniendo  un  poco  en  cada  rueda,  cu- 
briéndola con  otra  igual  y  señalándolas  con  una  copa  mas 
chica  que  la  que  se  usó  primeramente  para  que  les  quede 
un  bordito.  Después  con  una  pluma  se  embarran  con  yema 
de  huevo  deshecha  en  agua  y  se  mandan  al  horno. 

1.711.  Torrejüa*  de  monja, — Se  ponen  á  cocer  tres  papas 
regulares  y  se  muelen;  á  éstas  se  les  agrega  un  póculo  de 
leche  bien  hervida  con  hojas  de  laurel,  cascarita  de  limón, 


151 

un  poquito  de  anís,  una  rajita  de  canela  y  un  trocito  de  azu- 
carase baten  todas  estas  cosas  con  tres  huevos,,  á  que  que- 
de suelto,  se  pone  una  sartén  con  bastante  manteca  y  allí 
se  van  echando  ouoharaditas  y  ya  que  están  fritas  se  revuel- 
can en  azúcar  y  canela. 

1.712.  Hojudas. — A  dos  libras  de  harina,  seis  huevos, 
tres-  sin  clara,  un  pocilio  de  agua  de  tequesquite,  el  zumo 
de  media  naranja  dulce,  y  un  poco  de  vino;  se  amasa  hasta 
que  haga  ampollas.  Ya  que  truena  se  hace  una  bola,  se  en- 
vuelve con  una  servilleta,  se  pone  un  poco  al  sol,  se  extien- 
de con  un  palote  y  con  una  carretilla  se  cortan  las  tiras  lar- 
gas y  anchas;  la  manteca  para  freirías,  no  ha  "de  estar  muy 
caliente  para  que  queden  blancas.    Se  les  echa  su  almíbar. 

1.713.  Otras. — A  una  libra  de  harina  floreada,  cuatro 
huevos,  lo  que  hace  un  cascaron  de  manteca,  medio  pocilio 
de  vino  y  tantita  sal. 

1.714.  Otras  hojudas. — A  cuatro  libras  do  harina,  cuatro 
huevos,  dos  enteros  y  dos  sin  claras,  dos  mantequillas,  si 
son  grandes  una,  tantita  agua  de  levadura  tibia,  tantita  agua 
de  tequesquite  blanco,-  una  poquita  de  sal,  una  poquita  de 
azocar,  el  zumo  de  una  lima  agria,  y  así  que  está  bien  re- 
vuelto todo,  se  le  echa  media  libra  de  manteca 'derretida, 
se  amasa  hasta  que  está  de  punto  que  se  pueda  extender. 

1.715.  Gaznates. — A  media  libra  de  harina,  un  real  de 
huevos,  dos  con  claras,  una  poquita  de  agua  de  sal  y  una 
poquita  de  manteca;  se  palotea,  se  cortan  y  se  untan  con 
tantita  clara  de  huevo  y  se  rellenan  con  lo  4)ue  se  quiera. 

1.716.  Otros  gaznates. — Sé  toman  dos  yemas  de  huevo, 
una  cucharada  de  manteca  derretida,  su  punta  de  sal  y  la 
harina  flor  que  embebiere,  que  quede  blandita  la  masa;  así 


162 

■ 

que  esté*  bien  batida  te  extiende  con  uu  pelote,  ee  corten 
loe  temeftoe  y  ee  Ten  pegando  lee  pontitee  con  cleree  de 
huero,  se  ponen  á  enfriar  como  medie  hora  antee  de  freír- 
los;  después  de  esto  ee  untan  con  poca  almíbar  fria  para  que 
no  ee  desbagan ,  y  ai  ee  quiere  ee  pueden  rellenar  de  pasta 
de  coco  con  todos  sus  compuestos  de  pasas,  almendras  y  pi- 
fiones, su  agua  de  asaharfy  su  almíbar  por  encima. 

1.717.  Otro*. — Se  hace  la  masa  como  para  hojuelas,  se 
amasa  bien,  se  estira  y  se  cojen  unos  canutos  de  caña  rere! 
y  se  van  envolviendo  en  la  masa,  se  fríen  con  manteca  y  así 
que  se  enfria  se  sacan  los  canutos  para  rellenarlos  de  lo  que 
se  quiera,  con  natillas  ó  huevos  moles  6  hilados,  y  ee  les 
echa  su  almíbar,  pasas  y  almendras  por  encima. 

1.718.  Receta  para  redaño*. — A  catorce  claras  de  huevo, 
se  echan  cuatro  onzas  de  harina;  se  baten  poco  á  poco  hasta 
que  se  deshsga;  se  le  echa  un  polvo, de  azúcar,  y  bien  bati- 
das se  fríen,  se  echa  en  una  pi chancha  y  se  está  en  U  man- 
teca caliente:  se  voltean  y  se  sacan  en  un  platón,  en  donde 
ee  envuelven  á  manera -de  hojuelas. 

1.719.  Bedano*. — A  siete  claras  de  huevos  dos  onzas  de 
harina;  se  le  echa  azúcar  molida  al  gusto  y  tamizada,  se  des- 
hace todo  muy  bien,  se  cuela  y  pone  en  el  platón  una  capa 
de  azúcar  y  otra  de  masa,  y  así  sucesivamente.  Se  cuecen  á 
dos  fuegos  lentos  y  se  dejan  dorar. 

•  1,720.  Receta  para  chicharrones, — A  una  taza  de  harina 
una  taza  de  leche  y  cuatro  huevos;  se  deshace  la  harina  con 
la  leche  primero,  y  luego  los  huevos;  ya  que  está  bien  des- 
hecho todo,  se  embarra  la  sartén  con  manteca,  y  en  una 
olla  de  agua  hirviendo  se  pone  la  sartén  y  se  echa  allí  la  mi- 
li, á  que  dé  el  canto  de  un  cigarro  y  se  le  pone  encima  un  oo- 


153 

•  •  •        * 

tnalito  con  poco  fuego  para  que  cuaje;  luego  se  vacia  para 
partirlos  como  chicharrones  de  carne,  y  luego  se  fríen  en 
la  manteca  no  muy  caliente  y  se  está  bañando  con  la  cu* 
chara  para  que  esponjen,  y  se  doren;  se  hace  la  almíbar  pa- 
sadita.de  punto  y  se  le  echa  por  encima;  se  comen  calientes* 

1.721.  Chicharrones  fingido*. — Se  incorporan  en  una  ca- 
zuela con  dos  tazas  de  leche,  una  de  harina  y  cuatro  huevos, 
se  bate  6  amasa  todo  con  las  manos  hasta  que  no  le  quede 
granos:  se  echa  esta  masa  en  una  sartén  untada  con  mante- 
ca, que  se  pondrá  sobre  rescoldo  y  un  comal  encima;  cocida 
la  masa  so  parte  en  cuadros  y  se  le  señalan  otros  mas  pe- 
queños con  el  cuchillo,  para  imitar  los  chicharrones,  deján- 
dose la  masa  del  fondo  del  grueso  de  un  dedo;  en  esta  dispo- 
sición se  echan  en  manteca  bien  caliente  en  suficiente  can- 
tidad para  estar  bañando  con  violencia  los  chicharrones  á 
fin  de  que  esponjen  entonces  en  el  almíbar  caliente  sin  de- 
jarlos hervir  y  sacándolos  en  cuanto  les  penetre,  procuran- 
do que  por  encima  quede  mas  espeso  el  almíbar,  del  que  se 
sacan  para  servirse,  adornándolos  con  pasas,  piñones  y  al- 
mendras. 

1.722.  Otro»  chicharrones  finjidos. — Una  tasca  de  leche  y 
otra  de  harina  se  revuelven  bien;  se  baten  hnevos  competen- 
tes como  para  freír  y  se  juntan  con  la  harina»  mezclándolo 
bien  con  el  dulce  al  gusto.  Se  unta  una  tortera  con  manteca, 
se  echa  lo  dicho  y  se  pone  á  cocer  á  dos  fuegos.  Cuando  está 
se  aparta  y  se  deja  enfriar;  se  parte  atravesada  y  se  cortan 
los  cuarterones,  haciéndoles  sus  san  jitas,  como  á  los  chicha- 
rrones verdaderos.  Se  echan  en  almíbar  de  punto  á  qué 
den  un  hervor. 

1.723.  Bigotes  de  bien  me  saben. — A  cuatro  reales  de  leche 


164 

dos  onsas  de  almendra,  anadéanos,  asacar  al  gusto  y  doce 
yemas  de  huero;  se  remoja  la  almendra  en  agua  fría  y  así 
que  está  bien  remojada  ss  le  quita  la  cascara  y  se  muele 
muy  remolida,  lo  mismo  que  el  arros,  se  deshace  en  una  po- 
ca de  leche  lo  mismo  que  las  yemas  y  se  cuela  por  un  ceda- 
so,  se  le  echan  unas  rajas  de  canela,  se  pone  á  la  lumbre 
hasta  que  despega  bien  del  caso;  se  quita  de  la  lumbre  y  se 
deja  enfriar;  asi  quo  está  bien  frío  se  1*  saca  la  canela  y  se 
hacen  los  bigotes,  se  revuelcan  con  polvo  de  biscochos  duros 
y  después  en  yema  y  en  claras  de  huevo  juntas  y  se  fríen 
en  mantequilla.  Para  servirlos  seles  echa  azúcar  en  polvo. 
1,724.  Mamón  de  almendra. — A  una  libra  de  almendras 
dulces,  tres  docenas  de  amargas,  tres  cucharadas  de  almidón, 
media  libra  de  astfoar  y  diez  y  ocho  huevos.  Se  muele  la 
almendra  dulce  y  la  amarga  después  se  limpia,  lo  mismo  el 
almidón  y  la  asacar;  así  que  está  bien  incorporado  se  vacia 
en  molde  6  en  cajón  de  papel  untado  de  manteca;  se  pone 
al  horno  á  dos  fuegos  muy  mansos;  para  ver  si  ya  está  se 
prueba  con  un  popote,  si  sale  limpio,  ya  está. 


repostería 

1,726.  Manjar  real. — 8*  cuecen  pechugas  de  gallina  en 
agua  sin  sal ;  ya  cocidas  se  hacen  hebras  y  se  ponen  á  hervir 
en  almíbar  clarificada,  se  le  agrega  bastante  almendra  moli- 
da, se  le  da  buen  punto  y  se  apea. 

1,726.  Obro  manjar  real — A  doce  cuartillos  de  leche  se 
le  echan  cuarenta  yemas  de  huevo,  media  libra  de  arros 
muy  remolido  y  deshecho;  se  echa  el  dulce  competente  y  se 


165 

pone  en  la  lumbre;  cuando  comienza  á  hervir  ee  le  echan 
unos  clavos  enteros  y  unas  rajus  de  canela,  media. libra  de 
almendra,  una  taza  de  agua  de  azahar  y  se  le  dá'  punto  de 
manjar  blanco. 

1 ,727.  Crema,  — Se  ponen  á  hervir  cuatro  cuartillos  de  le- 
che con  dos  libras  de  azúcar  y  unas  rajas  de  canela  hasta 
que  es'é*  bien  suelta;  so  muele  y  se  deja  enfriar.  Se  le  echan 
dos  yemas  deshechas  en  un  pocilio  de  leche,  se  cuelan  por 
una  servilleta  y  se  pone  á  la  lumbre  á  que  tome  punto  mas 
alto  que  el  de  cajeta;  entonces  se  baten  ocho  yemas  con  una 
libra  de  azocar  y  una  de  mantequilla,  batiendo  primero  las 
yemas;  se  revuelve  todo  en  el  cazo  y  se  bote  hasta  que  haga 
ojos.  Hecho  esto  se  llenan  las  copas. 

1,1728.  Leche  crema. — A  cuatro  cuartillos  de  leche  cuatro 
tazas  de  almidón,  una  cantidad  de  arroz  como  si  fuera  para 
manjar  blanco,  unas  cascaras  de  lima  6  limón.  Se  echa  en 
agua  hasta  quo  salga  amarilla;  entonces  se  le  echa  en  la  le- 
che y  se  le  da  punto  no  muy  alto.  Después  se  muele  un  po- 
co de  azocar,  se  le  echa  por  encima  y  con  una  cuchara  de 
hierro  bien  caliente  se  quema  y  queda  comible. 

1.729.  Leche  de  shico-xapote. — A  dos  cuartillos  de  leche 
se  le  echa  una  libra  de  azúcar  y  un  pocilio  de  arroz:  estas 
dos  cosas  se  muelen;  se  echan  en  la  leche  y  se  cuelan.  Se 
pone  el  cazo  en  la  lumbre,  se  le  echa  una  raja  de  canela,  y 
en  cuanto  ha  espesado  un  poco,  se  pelan  cuatro  chico-zapo- 
tes, se  muelen  y  se  incorporan  en  lo  demás.  Ha  dé  quedar 
muy  espeso  y  así  que  está  se  pone  en  el  platón. 

1.730.  Leche  de  garbanzo. — A  dos  cuartillos  de  leche  una 
libra  de  azúcar,  un  pocilio  de  arroz  y  dos  de  garbanzos  co- 
cidos; se  muelen  lo  mismo  que  el  arroz  muy  remolidos,  se 


166 

deshacen  en  la  leche,  te  cuela,  te  le  echan  ocho  yemas  de 
huevo  y  sé  pone  á  la  lumbre.  Así  que  espesó  se  le  echa  un 
pocilio  de  riño  dé  Jerez.  No  ha  de -quedar  muy  espeso. 

1,731.  Leche  de  maman.  — Se  endulzan  al  gusto  ocho  cuar- 
tillos de  leche;  se  le  echan  yemas  de  huevo  hasta  ponerse 
amarilla;  se  le  agrega  un  poco  de  almidón.  8e  cuela  y  se 
pone  en  un  cazo  á  la" lumbre;  se  toma  punto- alto  y  se  baja 
del  fuego;  se  parta  el  mamón  en  rebanadas,  y  se  pone  en 
los  platos  una  capa  de  mamón  y  otra  de  leche  mientras  hay; 
se  polvorea  con  canela  y  .se  clavetea  con  pasas  y  almendras. 
1,733.  Leche  quemada. — Se  ponen  á  hervir  dos  cuartillos 
de  .leche  con  unas  rajas  de  canela  y  se  endulza  al  gusto, 
apartando  antes  un  poco,  es  decir,  como  una  taza  grande, 
en  la  cual  se  deshace  un  poco  de  almíbar,  y  después  se  mez- 
cla con  la  otra. 

Cuando  ya  enfrió  se  vuelve  i  poner  ala  lumbre  hasta  que 
espese.  Ta  que  espesó  se  aparta  á  que  se  enfríe  mucho,  y 
entonces  se  le  mezclan  varías  yemas  de  huevo-desbaratadas, 
pero  no  batidas  para  que  tome  color  bien  amarillo.  Se  vuel- 
ve á  poner  al  fuego  hasta  que  espese  de  modo  que  forme 
tez,  y  cuando  está  muy  fría  se  le  pone  azúcar  muy  remolida 
á  cubrir  muy  bien  la  leche  y  se  quema  con  una  hoja  de  hie- 
rro candente. 

1.733.  Leche  cuajada, — Se  toma  leche  sin  nada  de  agua  y 
se  pone  á  cocer  hasta  que  espesa,  se  endulza  al  gusto  y  ya 
fría  se  le  agJtega  el  pellejo  de  dos  mollejas  de  gallina  moli- 
das en  polvo,  se  pone  de  nuevo  á  cocer  como  jericalla  y  se 
polvorea  con  canela. 

1.734.  LeeJu  cuajada. — A  un  cuartillo  de  leche  bien  es- 
peso, se  le  echan  doce  yemas  dé  huevo,  dulce  al  gusto  y  un 


157 

poquito  de  almidón;  se  pone  á  cocer  y  cuando  espeta  se  le 
echa  una  poca  de  agua  de  az»har;  cuando  está  de  punto  se 
apea  y  se  ponen  alternando  rebanadas  de  mamón  y  leche; 
la  última  ha  de  ser  leche. 

1.735.  Otra  leche  cuajada.-- k  cuatro  cuartillos  de  leche 
se  le  echa  libra  y  media  de  Almendra  bien  molida,  media  li- 
hra  de  arroz,  una  pechuga  de  gallina  muy  remolida  y  dulce 
al  gusto,  se  pone  á  cocer  y  ya  que  está  de  punto  se  apea  de 
la  lumbre,  se  le  agregan  catorce  yemas  de  huevo  bien  bati- 
das, se  revuelve  y  se  bate  de  nuevo,  como  turrón,  se  vuel- 
ve á  la  lumbre  sin  dejar  de  batirlo,  y  así  que  está  de  punto, 
so  vacia  en  un  platón  y  se  sirve. 

1.736.  Leche  imperial. — A.  dos  cuartillos  de  leche  diez  y 
ocho  6  veinte  yemas  de  huevo,  media  libra  de  almendra  re- 
molida y  dos  cucharadas  de  almidón;  se  endulza  al  gusto, 
se  desbarata  el  almidón  y  los  huevos  en  la  leche,  se  cuela  y 
después  de  colada  se  echa  la  almendra  remolida  y  deshecha 
en  un  poco  de  leche:  se  pone  á  la  lumbre  y  se  le  da  el  pun- 
to de  leche  quemada. 

1.737.  Leche  de  huevo. — A  dos  libras  de  azúcar  clarificada 
y  de  punto  %d©  caramelo  se  le. echan  cuatro  cuartillos  de  le- 
che y  cinco  yemas  de  huevo.  Se  pone  á  que  tome  punto  y 
cuando  lo  tiene  alto  se  le  echan  dos  onzas  de  mantequilla  y 
se  vacia  luego  que  está  fría.  Se  le  pone  encima  un  comal 
con  lumbre  para  que  se  dore  por  encima. 

1.738.  Leche  de  coco. — A  ocho  cuartillos  de  leche  tres  li- 
bras de  azúcar,  dos  pozuelos  de  arroz  bien  lavado  y  molido. 
Se  pone  á  la  lumbre  un  cazo,  se  le  eoha  esto  y  el  coco  ralla- 
do, se  toma  el  punto  de  suerte  que  echando  unas  gotas  de 

XJl  COCINERA  POBLANA. — TOM.    XI — 11. 


168 

agua  se  vuelven  bolitas,  y  ya  está  bueno;  ee  echa  en  loe  pía* 
íonee  y  te  le  haeen  dibujos  con  polvo  de  canela. 

1.739.  Leche  de  coco. — Se  atoa  la  carne  de  un  coco  y  te 
muele  con  una  taza  de  agua  caliente;  ae  desbarata  y  expri- 
me con  una  aerrilleta  y  te  vuelve  á  poner  la  coladera  con 
agua  caliente  y  la  leche  que  sale;  para  cada  tasa  caldera  ae 
echan  cuatro  yemaa  de  huevo;  ae  clarifica  una  libra  de  asa- 
car, y  ya  que  está  de  medio  punto  se  deja  enfriar;  se  le 
echan  dos  tasas  de  leche  de  óooo,  se  desbarata  bien  y  se 
vuelve  á  poner  al  fuego  á  que  tome  el  punto  de  huevos 
moles. 

1.740.  Oirá  teche  de  coco. — A  cada  taza  de  leche  de  coco 
se  le  echa  media  libra  de  asnear  y  tres  yemas  de  huevo;  se 
rallan  los  cocos,  se  exprimen  con  la  mano  y  á  cada  tasa  cal- 
dera de  leche  se  les  deslíen  tres  yemas  de  huevo;  si  queda 
muy  espeso  se  le  echa  una  poquita  de  agua;  se  cuela  por  un 
paño,  se  hace  el  almíbar  clarificada,  y  estando  de  punto  al- 
to, se  echa  la  leche  y  se  está  meneando  con  el  revés  de  una 
cuchara  de  palo  y  estando  mi  rato  á  la  lumbre,  luego  que 
ha  hervido  se  aparta. 

1.741.  Leche  de  coco  grande. — Se  muele  el  coco,  se  rocía 
oon  agua  y  se  exprime  con  una  servilleta,  se  le  echan  ocho 
yemas  de  huevo  en  leche  y  se  deshacen;  se  elariOca  una  li- 
bra de  azúcar  y  cuando  está  de  medio  punto  se  baja,  se  echa 
el  coco,  y  se  vuelve  ú  h  lurebreá  que  tome  punto:  se  le  echa 
vino  Jerez. 

1.742.  Leche  mulata.  — A  ocho  cuartillos  de  leche  tres  li- 
bras de  azúcar  blanca  en  polvo  y  un  pocilio  de  arroz  remo- 
jado; éste  se  muele  y  se  cuela  en  la  misma  leche.  8e  pone 
á  remojar  una  libra  de  almendra,  se  muele  y  se  aparta  me- 


1G9 

lia  libra,  la  que  queda,  te  tuesta  y  muele  muy  remolida,  te 
¡uela  con  la  misma  la c lie;  se  pone  un  cazo  en  la  lumbre  con 
>sta  leche  y  te  deja  hft.sta  que  espese;  cuándo  ya  está  se  va- 
na en  los  platones  1»  media  libra  de  almendra  que  se  apar- 
<5,  se  corta  en  tiritas  y  se  echan  muy  tupidas  á  los  platones; 
te  muele  azúcar  y  se  polvorea  la  leche  por  encima. 

1.743.  Leche  mxdata.  — Para  ocho  cuartillos  de  leche  ondul- 
ada al  gusto,  se  remo j  a  un  pocilio  y  medio  de  arroz;  se  lava 
i  se  mezcla:  se  revuelve  todo  en  un  cazo  y  se  pone  en  la  lum- 
bre: luego  se  limpia  mectia  libra  de  almendra,  se  tuesta  en  un 
jornal  y  se  remuele,  se  ouela  con  la  leche  y  se  echa  en  el  ca- 
so; las  coladuras  se  vuelven  á  moler  hasta  que  no  quede  na- 
ia:  se  le  toma  punto  d«s  manjar  blanco;  se  echa  en  platones; 
te  les  pone  por  encima,  almendras  tostadas  y  partidas  por 
a  mitad,  se  cubren  con  azúcar  en  polvo,  se  colocan  en  la 
íornilla  sin  lumbre  y  etsta  se  pone  por  encima  sobre  un  co- 
naL  Ya  que  está  bien    dorado  se  quita. 

1.744.  Flan  de  Uch.-e* — Se  ponen  á  hervir  cuatro  euarti- 
lo8  áe  leche  con  una  reajita  de  canela  y  una  cascarita  de  li- 
nón verde;  se  deja  espesar  á  que  quede  como  atole,  se  de- 
ja enfriar  y  entretanto  se  baten  doce  yemas  de  huevo  hasta 
|ue  queden  muy  duras»  se  mezclan  á  la  leche  con  una  libra 
le  azúcar,  se  vuelve  a  \>atir  y  se  cuela. 

Se  muelen  seis  onzas  de  azúcar,  se  ponen  en  una  sartén 
i  que  se  forme  caramelo,  y  así  que  hace  mucha  espuma  se 
facía  en  el  molde  de  Hoja  de  lata  á  que  cubra  bien  por  to- 
los lados;  así  que  se  en€ria  se  vacia  la  leche  y  se  pone  á  eo- 
ier  en  baño  de  María,  gDoniéndole  lumbre  por  encima  hasta 
]ue  dore  y  quede  bien    cocida 

1.745.  Flan  de  leche.  — Bátanse  muy  bien  diez  y  seis  ye- 


160 

mas  de  huero,  y  después  se  echa  una  libra  de  azúcar  blanoa 
y  ana  cucharada  de  harina  6  almidón,  y  se  bate  todo  hasta 
qne  quede  bien  mezclado;  después  se  derrite  en  un  caso  un 
cuarterón  de  azúcar  sin  añadirla  agua,  y  cuando  este*  en  pun- 
to de  caramelo  claro,  úntese  con  ello  la  parte  interior  de  la 
cacerola;  échense  en  ella  las  yemas,  nn  cuartillo  de  buena 
leché  y  mézclese  con  el  huevo  f  azúcar  muy  lentamente,  y 
se  menea  mucho  con  una  cuchara  de  madera,  y  cuando  esté* 
todo  bien  mezclado  se  le  echa  raspadura  de  cascara  de  limón 
6  esencia  del  mismo;  unas  gotas  son  suficiente» :  y  póngase 
todo  al  fuego,  con  tapadera  por  encima  llena  de  ascuas,  y 
cuando  esté  trabado  se  retira,  dejándolo  enfriar,  poniéndolo 
después  en  el  plato  que  ha  de  servirse.  Si  se  quiere  que  ten- 
gan un  gusto  á  café,  se  cuece  antes  la  leche,  y  con  ella  una 
muñeca  llena  de  café,  que  se  retira  después  y  le  da  buen 
gusto;  para  conocer  si  está  en  punto  el  fian,  se  roete  en  él 
un  popote  y  al  sacarlo  se  conoce  como  está. 

1.746.  Flan  de  leche, — Se  hierren  tres  cuartillos  de  leche 
hasta  que  se  reducen  á  dos;  se  endulza  lo  suficiente  y  se  de- 
ja hervir  otro  rato.  Se  le  echan  dos  hojas  de  naranja  con 
las  que  dará  dos  hervores,  se  aparta  y  menea  para  que  no 
forme  bolas  y  cuando  esté  tibia  se  mezcla  con  siete  yemas 
de  huevo  y  la  clara  de  uno,  que  se  tendrán  batidas  de  an- 
temano; se  pasa  todo  esto  por  un  colador;  se  tiene  prepara- 
da desde  antes  una  cacerola  don  un  polvo  de  azúcar  hecha 
caramelo  (por  medio  del  fuego)  de  color  claro.  En  esta  ca- 
cerola se  pone  la  preparación  anterior  y  se  cuece  en  baño 
de  María. 

1.747.  Ponche  de  leche.  — Después  de  cocida  la  leche  se  en- 
dulza al  gusto  y  se  le  mezclan  yemas  de  huevo  hasta  que 

v. 


1C1 

este*  bien  amarilla;  se  cuela  y  se  pone  á  que  espese  un  poco; 
antes  de  apartarla  de  la  lumbre  se  Je  agrega  una  cucharada 
de  ralladura  de  naranja  y  cuando  ha  dado  un  hervor  se  apar- 
ta del  fuego.  Al  irle  á  servir  se  le  agrega  coñac  al  gusto  y 
se  le  arrima  al  fuego  batiéndolo  mucho  con  molinillo  y  se 
▼acia  en  las  copas  caliente. 

1.748.  Punche  de  leca*.— Se  ponen  siete  cuartillos  de  le- 
cho y  se  deja  que  dé*  un  hervor:  luego  se  endulza  al  gusto 
y  se  le  mezcla  media  libra  de  almendra,  no  muy  remolida; 
se  le  echan  unas  rajas  de  canela,  una  muñequitade  vainilla 
y  un  poquito  de  limón,  se  pone  á  la  lumbre  á  que  dé  un 
hervor  fuerte,  se  aparta  y  se  echa  en  una  olla  limpia. 

1.749.  Bocadillo  de  leche. — A  dos  cuartillos  de  almíbar  de 
punto  dos  cuartillos  de  leche;  se  pone  á  hervir  y  se  le  toma 
punto  en  agua  hasta  que  cuaje,  se  baja  y  se  bate  bien  has- 
ta que  medio  enfrie;  se  voltea  sobre  una  tabla  húmeda  y  se 
corta  caliente  de  los  tamaños  que  se  quiera. 

1.750.  PucJuro  dt  leche. — A  una  taza  caldera  de  leche  tres 
yemas  de  huevo  siendo  para  jericalla,  la  azúcar  competente 
y  se  pone  á  cuajar  en  una  cazuela  de  agua  hirviendo  con  un 
comalito  de  rescoldo  encima;  se  echa  en  una  taza  grande, 
se  le  echa  canela  por  encima  y  se  mete  al  horno. 

1.751.  Torreja»  de  leche.'— A  una  caldereta  regular  de  le- 
che poco  mas  de  una  onza  de  almidón  y  bastante  azúcar;  se 
pone  á  cuajar  hasta  que  este*  de  punto  muy  subido;  se  pone 
á  enfriar  y  se  echa  en  un  platón  de  un  día  para  otro  y  se 
fríen  con  huevos  como  chiles;  se  les  eoha  canela  por  encima. 

1.752.  Torreja»  de  manjar  blanco* — Se  'hace  el  manjar 
blanco  muy  subido,  no  se  le  echa  nada  de  agua  á  la  leche, 
se  enfría  dos  6  tres  dias,  se  rebana  y  se  baten  unos  huevos 


1*2 

y  m  le  echa  un»  poca  de  harina  pera  freirloe  y  es  exprime 
oon  ana  servilleta,  qoe  no  te  raaebaqoen  y  puesto  el  almf* 
bar  te  echan;  ti  ae  quiere  se  clavetean  antes  de  freirías,  oon 
pasas,  almendras  y  que  hiervan  poco  en  el  almíbar;  se  echan 
en  nn  platón  con  canela  en  polvo  por  encima. 

1,703.  Crema*. — Tómese  mitad  de  nata,  mitad  de  leche 
y  mitad  de  astfoar,  póngase  al  fuego  y  déjese  menguar  una 
tercera  parte;  se  separa  del  fuego,  y  luego  que  esto  casi  ti- 
bia  se  echa  un  poco  de  cuajo  desleído  en  agua,  y  óchese 
todo  en  una  casuela  después  de  pasado  por  el  tamiz;  hága- 
sela espesar  con  fuego  muy  lento  por  encima  y  debajo,  se 
bafia  y  se  sirve  fría;  también  se  puede  espesar  al  bufio  de 
María,  sobre  todo  si  se  ha  de  servir  en  pocilios. 

1,754.  Crema  de  chocolate. — Deslíase  chocolate  en  agua 
en  la  proporción  de  un  vaso  por  libra;  añádase  un  poco  de 
asdcar  y  mózolese  con  nata,  leche  y  jemas  de  huevos  en  la 
proporción  de  seis  por  cada  una  de  nata  ó  leche,  añádase  un 
granito  de  sal,  ouólese  como  la  anterior  y  hágase  espesar  al 
baño  de  María,  cuidando  que  no  hierva^ 

1,766.  Crema  de  café. — Tómese  un  cuarterón  de  cafó  cru- 
do para  un  cuartillo  de  nata;  llágase  dorar  y  no  tostar,  en 
una  sartén  limpia,  y  échese  en  la  crema  hirviendo,  tápese 
bien  y  se  cuela  esta  infusión;  añádase  á  ella  yemas  de  hue- 
vo en  la  proporción  indicada  en  el  artículo  anterior,  azúcar, 
un  poco  de  sal;  concluyase  como  la  precedente. 

1,766.  Crema  de  té. — Póngase  en  infusión  el  tó  en  la  na- 
ta y  leche  hirviendo  durante  una  hora,  y  procódase  para  lo 
demás  como  para  la  crema  de  cafó. 

1,757.  Crema  de  flor  de  naranja  al  limen  ó  día  vainilla.  — 
Todas  las  cremas  se  hacen  cerno  tas  de  cafó  ó  tó,  por  infu- 


163 

pión  en  la  nata  ó  leche  del  ingrediente  con  qne  se  quiere 
darla  el  gasto.  Se  conducen  y  hacen  tornar  punto  igualmen- 
te al  baño  de  María  y  te  sirven  frías. 

1.758.  Crema  á  ¿a^raw^ipan. —Deslíase  harina  en  huevos, 
yemas  y  claras  juntas,  y  deslíase  esta  pasta  en  la  crema,  en 
la  proporción  de  siete  cuartillos  y  medio  y  dos  huevos  por 
cucharada  de  harina;  añádase  un  buen  pedazo  de  azúcar, 
algunos  granos  de  s*l,  flor  de  naranja  tostada  y  machacada, 
corteza  de  limón  raspada  ó  bien  en  pedazos,  hágase  cocer 
todo  media  hora,  dándole  vueltas  sin  cesar;  se  saca  del  fue- 
go, se  deja  enfriar  y  se  baña. 

1.759.  Crema  al  caramelo. — Póngase  azúcar  en  polvo  en 
una  cacerola  ti  ollita  de  cobre,  y  no  de  estaño;  derrítase  sin 
agua  en  fuego  fuerte  y  que  tome  un  color  subido;  échese, 
seguí  la  cantidad  de  caramelo,  mas  ó  menos  flor  de  naranja 
garapiñada  y  de  antemano  deshecha  en  agua;  añádase  nata 
ó  leche  en  la  misma  proporción;  cuélese  todo  después  de  co- 
cido y  espósese  al  baño  de  María;  se  sirve  fría  como  las 
otras. 

1.760.  Crema  batida. — Pónganse  en  el  cazo  dos  cuartillos 
de  buena  leche;  añádase  un  polvito  de  goma  arábiga  disuel- 
ta en  un  poco  de  agua  de  flor  de  naranja;  bátase  con  una 
varita  de  palo:  cuando  la  crema  esto  como  nieve  se  pone  con 
una  espumadera  por  cucharadas  en  un  platón;  esta  prepa- 
ración debe  hacerse  pocos  minutos  antes  de  servirla  y  en  el 
sitio  mas  fresco.'  Todas  las  cremas  b  .«ti  las  se  hacen  del  mis- 
mo modo;  para  la  de  rosa  se  pone  er.  ir  fusión  un  puñado  de 
hojas  de  rosa  en  leche  ó  nata  cocida;  para  la  de  chocolate  se 
añaden  á  la  crema  dos  cucharadas  de  che  colate  muy  finamen- 
te raspado;  la  de  cafó  anadiando  una  cucharada  muy  fuerte. 


464 

Se  puede  también  hacer  oon  frambuesas  ó  f retes;  en  e§- 
te  oteo  se  saca  el  jugo  de  ella*  exprimiéndoles  en  un  peño 
y  dejándolo  caer  sobre  le  éreme  que  se  bate  en  seguida. 
.  1,761.  Crtma  de  almendrón  dulces. — Se  despelleja  un  pu- 
ñadito  de  almendras  dulces,  y  si  gustase,  una  amarga,  echán- 
dolas por  algunos  minutos  en  agua  hinriendo,  y  ee  macha- 
can con  bn  poco  de  agua;  se  baten  en  un  cuartillo  de  leche 
dos  claras  de  huero  y  cuatro  onsas  de  azúcar  en  polvo;  se 
pone  la  leche  á  fuego  templado  hasta  que  se  reduzca  á  la 
cuarta  parte,  se  anadea  las  almendras  y  se  le  deja  hervir  por 
algunos  minutos;  se  añade  una  oucharada  de  flor  de  naran- 
ja, y  cuando  esté  fría  se  adorna  oon  almendras  aearame- 


1.762.  Crema  de~  rosa. — Tómense  dos  cuartillos  de  buena 
crema,  que  se  harán  hervir;  cuando  ella  haya  subido,  colo- 
qúese al  borde  de  un  horno  y  azucáresela,  añádase  un  cuarto 
de  gota  de  esencia  de  rosa  y  de  carmín  líquido  para  darle  co- 
lor; mientras  qneeeta  mezcla  se  in61tr*  rómpanse  seis  ú  ocho 
huevos,  de  que  se  aprovecharán  solo  las  yemaa,  que  se  bati- 
rán con  una  cuchare  de  palo  hasta  que  se  liguen  bien.  Viér- 
tase en  una  sopera  ó  sobre  un  platón  hondo  ó  en  pocilios  y 
hágaselas  tomar  un  baño  de  María,  como  las  de  vainilla. 

1.763.  Crema  sambaglioru,  ó  espuma  italiana, — Tómense 
doce  yemas  de  huevos  frescos  y  cuatro  vasos  de  vino  de  Ma- 
dera ó  de  excelente  vino  bL'tnoo,  seis  onzas  de  azocar  y  un 
puñado  de  canela;  póngase  todo  en  una  cacerola  sobre  un 
fuego  vivo,  menéese  de  priai  con  un  molinillo  de  chocolate 
basta  que  la  espuma  haya  11  añado  la  cacerola;  sírvase  sin 
perder  un  momento  en  pocil  los  de  crema. 

1 .764.  Crema  báquica.  — Viértase  en  una  cacerola  un  ouar- 


166 

tillo  de  buen  vino  blanco,  azúcar,  corteza  de  limón  y  canela, 
y  hágase  hervir;  rómpanse  siete  ú  ocho  huevos  para  aprove- 
char las  yemas,  que  se  batirán  con  ana  cuchara  de  palo  has- 
ta que  estén  bien  ligadas,  ligándolas  también  con  el  vino, 
que  se  verterá  poco  á  poco.  Pásese  luego  por  un  tamiz  y  viér- 
tase en  los  pocilllos  para  tomar  el  baño  de  María. 

1.765.  Crema  atada. — En  un  cuartillo  de  leche  se  hace 
hervir  otro  de  crema,  cuatro  onzas  de  azúcar,  tres  claras  de 
huevo  y  una  cucharada  de  caramelo;  reducido  que  sea  á  la 
mitad,  se  pasa  por  tamiz  y  sé  deja  enfriar. 

1.766.  Cremas  defresas  ó  grosellas. — Se  exprimen  muy  bien 
las  fresas  ó  grosellas  y  se  pasa  por  tamiz  el  jugo;  se  le  aña- 
de crema  batida  y  se  bate  después  todo  para  servirla  en  se- 
guida. Lo  mismo  se  observa  para  hacerla  de  capulines,  guin- 
das, etc. 

1.767.  Crema  de  vino.  — Se  baten  ocho  6  diez  yemas  de  hue- 
vos con  suficiente  azúcar  en  polvo,  y  al  batido  se  le  va  echan- 
do poco  á  poco,  y  sin  dejar  de  menearlo,  una  botella  de  vino 
de  Valdepeñas  6  Málaga,  según  agrade,  azucarado  y  aromá- 
tico; se  cuece  todo  sin  dejar  de  menearlo,  hasta  que  la  crema 
esté  perfectamente  ligada. 

Las  cremas  se  pueden  hacer  del  olor  y  sabor  que  se  quie- 
ra; con  solo  echar  unas  gotas  dé  la  esencia  aromática' que 
mas  guste. 

1.768.  Crema  de  pastelería. — Hágase  hervir  medio  cuarti- 
llo de  leche  y  coloqúese  en  una  cacerola  con  una  cucharada 
de  harina,  tres  yemas  de  huevo  y  un  grano  de  sal;  deslíase 
todo,  mojándolo  un  poco  con  la  crema;  coloqúese  esta  mez- 
cla sobre  el  fuego,  meneándola  hasta  que  haya  adquirido  una 
consistencia  conveniente;  retíresele  del  fuego  y  añádanse  dos 


106 

oras  do  mantón  clarificada  y  otro  tanto  do  asacar  on  polvo. 
Vuélvase  á  poner  al  fuego  y  menéete  hasta  que  la  croma  ha- 
ya tomado  cuerpo,  añadiéndola  al  perfume  que  ao  quiera, 
sean  dos  onsas  do  chocolate  en  polvo  6  un  poco  do  vainilla 
on  polvo.  Si  so  quiero  café  so  ocharán  tres  onzas  do  cafe*  tos- 
tado on  grano  en  la  leche  hirviendo,  so  cubrirá,  y  cuando 
esta  infusión  está  tibia,  so  lo  coloca,  y  después  so  procederá 
como  so  ha  dicho.  So  puedo  hacer  también  do  vainilla.  Es- 
ta crema  está  destinada  á  guarnecer  las  tortas  de  los  entre- 
meses. 

1.769.  Crema  medicinal. — Se  toman  dos  yemas  de  huevo, 
una  onza  de  azúcar  molida  y  una  cucharada  do  flor  do  naran- 
ja; póngase  en  una  tasa  regular  y  bátase  hasta  que  so  incor- 
pore bien  todo,  y  después  sin  dejarlo  do  batir,  échese  un 
vaso  de  agua  de  medio  cuartillo  muy  caliente;  esta  crema  la 
usan  los  enfermos  como  un  pectoral  excelente. 

1.770.  Poda  para  antes.— Se  pono  una  poca  de  azúcar 
oonforme  á  la  cantidad  que  ha  de  ser,  so  monda  una  pifia, 
almendras  y  camotes,  se  muele  todo  y  so  echa  en  el  almíbar 
ya  clarificada;  se  revuelve,  se  hiervo  hasta  que  so  toma  una 
poca  de  almíbar  de  medio  punto;  so  lo  ocha  una  poca  do 
agua  de  azahar  para  ir  mojando  el  mamón  y  poniendo  las 
capas,  que  una  ha  do  ser  de  la  pasta  y  otra  do  mamón  con 
canela,  pasas,  almendras,  pifiones,  nueces  y  acitrón,  prosi- 
guiendo hasta  la  última  que  ha  de  sor  de  la  misma  pasta  con 
pasas,  almendras  y  acitrón. 

1.771.  i4»<e.— So  pone  á  cocer  bastante  porción  do  leche 
y  se  pone  con  la  azúcar  y  así  que  ha  hervido  bien  se  pone  á 
enfriar;  se  le  ochan  bastantes  yemas  de  huevo  como  para  jo- 

i,  se  tiene  molida  bastante  canela,  pastilla,  azúcar  y 


167 

hechas  rebanadas  de  mamón  y  pan  frío  muy  delgaditas;  se 
'le  echa  su  canela,. azúcar  y  pastilla;  luego  aquella  leche  y 
yemas  se  le  echa  muy  bien  por  encima;  ha  de  estar  espesi- 
to  con  el  huevo  para  que  cuaje  bien  y  luego  se  pone  dentro 
de  un  cazo  con  agua  hirviendo,  y  se  le  pone  su  comal  enci- 
ma: así  que  está  muy  bien  cuajada,  sin  que  le  caiga  gota 
de  agua  se  saca  del  cazo;  ya  que  sea  hora  de  echarlo  en  los 
platos,  se  tiene  ya  prevenida  leche  muy  bien  cocida  con 
dulce  y  en  ella  se  van  estrellando  huevos  para  ponerlos  en- 
cima  de  la  torta. 

1.772.  Ante  de  lo»  claveles. — Para  un  platón  grande,  son 
menester  tres  6  cuatro  betabeles  bien  cocidos,  se  muelen 
bien  en  un  metate,  ya  estará  hecho  el  almíbar  con  seis  libras 
de  azúcar,  que  á  los  dos  hervores  se  cuela  y  se  le  echa  el  be- 
tabel, bastante  ajonjolí,  clavo,  canela,  agua  de  azahar  y  así 
que  se  despega  del  cazo  se  le  eohan  almendras  molidas,  y  á 
falta  de  ellas  pepitas  de  calabaza;  se  lavan  bien  con  agua  de 
ceniza  hasta  que  queden  bien  blancas  y  se  marta  jan  en  gra- 
no de  almendra;  se  echa  aquella  pasta  y  se  baja  á  enfriar;  así 
que  este*  fría  se  echa  en  el  platón  y  se  rocia  el  mamón  con 
el  almíbar  raríta,  y  para  que  salga  bien  encarnada  se  le  echa 
panecillo,  y  después  de  puesto  en  el  platón  se  va  labrando 
y  han  de  estar  deshojados  unos  claveles  en  agua  de  azahar, 
sin  que  le  queden  puntas  blancas  y  se  le  van  esparciendo 
por  encima. 

1.773.  Ante  de  mantequilla. — Se  hacen  rebanadas  de  ma- 
món gordas,  y  con  leche  muy  dulce  se  humedecen,  se  asan 
unas  pechugas  y  se  pican  en  seco,  y  sobre  el  mamón  se  po- 
ne una  capa  de  natas  de  leche  y  otra  de  las  pechugas;  la 
natas  van  salteadas  entre  las  pechugas,  se  le  echa  pastilla. 


168 

colorada  por  encima  poniéndolo  £  do»  fuegos  hasta  que  críe 
costra;  adornándolo  al  último  con  pasas,  almendras,  piño- 
nes  y  acitrón. 

1,774.  Otro  de  mantequilla. — 8»  hacen  rebanadas  de  pan 
delgadas,  estas  se  fríen  en  mantequilla;  y  la  leche  cocida  con 
asacar  se  echa  sobre  las  rebanadas;  luego  se  mezclan  con  pa- 
sas y  lo  demás  como  arriba  echándole  por  encima  ajonjolí, 
canela,  grajea,  el  ojaldrado  con  ocho  claras  bien  batidas, 
se  le  echa  azúcar  por  encima  y  se  pone  á  dos  fuegos  hasta 
que  cuaje. 

1,776.  Ante  de  betabel. — Se  muelen  los  betabeles  cocidos 
con  una  poca  de  almendra  y  otro  tanto  de  coco,  cada  cosa 
á  parte;  se  hacen  huevos  moles  y  cada  pasta  se  cuece  en  el 
almíbar,  y  después  de  darle  punto  se  le  echa  la  agua  de  azahar 
necesaria,  y  el  mamón  se  humedece  con  almíbar;  luego  se 
pone  una  capa  de  cada  cosa,  y  la  última  será  de  hueros  mo- 
les echándole  canela  y  pastilla  por  encima. 

1.776.  Ante  de  jerieaüa. — Sobre  almíbar  de  punto  frío  se 
baten  yemas  de  huevo,  y  se  cuecen  hasta  que  esttfn~bien  es* 
pesas,  se  van  poniendo  capas  do  mamón  rebanado;  y  encima 
de  esta  capa  una  de  pasta  y  así  se  sigue  hasta  llenar  el  pla- 
tón, y  cada  capa  se  ya  rociando  con  almíbar  y  pastilla  en- 
carnada molida. 

1.777.  Ante  de  garbanzo.  — Se  cuecen  los  garbanzos  y  se  les 
quita  los  pellejos,  se  muelen  juntos  con  pifiones,  se  ciernen 
en  cedazo  los  pifiones  y  los  garbanzos;  se.  echan  en  almíbar 
que  esté  bien  clarificada  y  se  le  echan  unas  yemas  de  huero 
y  almendras  molidas;  se  pone  á  cocer  hasta  que  tome  cuerpo, 
y  se  le  echa  riño  y  agua  de  azahar;  se  va  poniendo  de  esta 


1C9 

pasta  sobre  el  mamón  remojado  con  almíbar  y  Tino  y  cañe* 
la  en  polvo,  y  se  adorna  con  pasas,  almendras  y  pifiones. 

1.778.  Ante  de  nuece».  — Se  remojan  las  nueces  y  seles  qui- 
ta el  pellejo  amargo,  se  coje  un  tanto  de  nueces,  otro  de  al- 

'mendras  y  otro  de  piñones;  todo  se  muele  y  ne  deshace  en 
el  almíbar  bien  clarificada,  se  pone  á  cocer  con  agua  de  aza- 
har; y  así  que  está  se  ponen  las  capas  de  mamón  rociado  con 
almíbar  y  todos  los  requisitos  y  canela. 

1.779.  Ante  de  leche.— Se  hierve  la  leche  a  que  quede  es* 
pesa  y  se  le  van  sacando  las  natas,  según  la  cantidad  que 
ha  de  ser;  se  le  revuelve  canela  y  un  poquito  de  clavo  de 
olor,  agua  de  azahar  y  las  natas,  rebanada  la  bincotela,  se 
moja  con  almíbar  de  medio  punto,  y  se  pone  en  el  platón, 
las  capas  de  biscotela  y  leche,  y  se  mete  al  horno  á  que  cua- 
je y  canela  por  encima. 

1.780.  Ante  de  mantequilla. — La  mantequilla  helada  se 
derrite  y  en  agua  fría  se  va  helando,  se  pone  sobre  mamón 
y  se  le  echa  miel  de  punto  por  encima  y  polvo  de  pastilla 
colorada:  á  un  cuartillo  de  leche  se  le  echan  doce  yemas  de 
huevo  y  el  dulce  al  gusto,  agua  de  azahar  y  un  poco  de  al- 
midón meneándolo;  se  cuece  hasta  que  quedé  como  atole 
espeso,  se  pone  en  el  platón  una  capa  de  mamón  y  otra  de 
ajonjolí  tostado;  por  encima  almendras,  acitrón  y  canela. 

1.781.  Ante  de  pina. — Se  muolen  las  pifias,  se  echan  en 
almíbar  con  olor,  y  agua  de  azahar,  se  pone  rí  la  lumbre  á 
que  tome  cuerpo:  se  echan  capas  de  esto  y  biscotela  bien 
mojada  en  almíbar  y  se  cuece  en  el  horno  y  se  le  echa  pas- 
tilla por  encima. 

1.782.  Ante  de  huevo»  mole». — A  una  libra  de  azúcar  he- 
cha almíbar  de  medio  punto  que  está  tibia  se  le  baten  dos 


170 

yante»  de  huero»  haata  que  están  incorporadas;  se  pona  en 
un  ouo  con  lumbre  y  ta  lee  echa  ana  poca  de  agua  de  azahar; 
ae  deja  herrir  hasta  que  tome  punto  menor  que  de  sujeta; 
ae  moja  el  mamón  oon  almíbar,  ae  pone  una  capa  de  mamón 
y  otra  de  pasta. 

1.783.  Ante  de  almendra*.  — A  doa  librea  de  almendra*  pe- 
ladas y  molidas,  cuatro  librea  de  azúcar  echa  almíbar  bien 
clarificada  y  aubida  de  punto,  ae  pone  á  enfriar  un  poco  y 
ae  le  echa  la  almendra;  ae  menea  haata  que  incorpore,  luego 
ae  pone  á  fuego  manso,  y  ain  quitarle  de  la  lumbre  se  le  echan 
treinta  yemaa  de  huevos  batidas  con  un  cuartillo  de  vino; 
ae  menea  hasta  que  despegue  del  cazo  y  se  pone  una  capa 
de  mamón  rociada  con  vino  y  otra  de  pasta  y  grajea  por  en- 
cima 

1.784.  Ante  de  jicama.  — Se  hacen  las  rebanadas  muy  del- 
gadas, se  revuelven  con  zanahorias  picadas,  todo  se  echa  en 
almíbar  de  medio  punto  y  ae  está  conservando  oon  sus  olo- 
res al  viento;  todo  esto  se  muele,  se  echa  una  capa  de  mamón 
y  otra  de  paata,  pastilla  y  ajonjolí  encima  de  cada  capa. 

1.785.  Ante  de  coco.  —Al  oooo  se  le  quita  la  cascara  parda, 
se  ralla  6  se  muele;  se  echa  en  almíbar  de  medio  punto  y  ae 
conserva;  se  echan  pasas,  almendras  y  olores,  una  capa  de 
esta  y  otra  de  mamón,  pastilla  y  ajonjolí  por  encima, 

1.786.  Ante  de  jitomate. — Los  jitomates  maduros  y  asa- 
dos en  el  horno  sobre  una  tabla;  de§puea  en  una  servilleta  ae 
exprimen  ¿  que  no  les  quede  nada  de  jugo;  á  cada  cuartillo 
de  este  sumo  media  libra  de  azúcar  blanca  con  una  raja  de 
canela,  seis  clavoa,  un  pedazo  de  nuez  moscada  y  todo  mo- 
lido se  pone  á  hervir  hasta  que  quede  hecho  almíbar;  se  le 


171 

echa  un  pocilio  de  vino  blanco  y  ae  pone  una  capa  de  mamón 
y  otra  de  la  mezcla,  en  sima  pastilla  y  canela. 

1.787.  Ante  de  palacio, — Se  cojen  cincuenta  hueros  y  se 
ponen  á  cocer  hasta  que  endurezcan,  las  yemas  se  han  de 
cernir  con  cedazo  de  cerdas;  se  clarifica  una  cuarta  de  azú- 
car;  se  echa  una  libra  de  almendras  molidas  hasta  que  to- 
me punto  el  azúcar,  se  saca  todo  esto,  se  echa  en  el  almíbar 
ya  de  punto,  se  ponen  las  capas  de  mamón  y  lo  dicho. 

1.788.  Ante  de  requesón, — Se  muele  el  requesón  y  se  echa 
en  almíbar  con  yemas  de  huevo  y  olor;  se  cuece  y  se  pone 
sobre  mamón  remojado  con  almíbar,  y  por  encima  todos 
sus  requisitos. 

1.789.  Ante  4e  leche, — Se  echan  en  la  leche  bastantes  ye- 
mas de  huevos,  azúcar,  canela,  agua  de  azahar  y  olor,  todo 
competente,  ¿1  gusto;  se  van  poniendo  capas  de  mamón  y  se 
van  mojando,  que  queden  muy  bien  empapadas,  y  ponién- 
doles en  todas  las  capas  todos  sus  requisitos  y  su  polvo  de 
canela;  primero  se  unta  la  cazuela  de  manteca  para  poner 
dichas  capas;  así  que  está  todo  puesto  se  pone  á  cocer  entre 
dos  fuegos  6  en  horno,  con  canela  por  encima. 

1.790.  Ante  de  huevos  mejidoe. — Uña  libra  de  azúcar  cla- 
rificada se  espesa  de  medio  punto;  ya  que  este*  así  se  pone 
á  enfriar,  se  le  echan  seis  yemas  de  huevos,  se  les  quita  el 
pellejo  y  se  revuelve  muy  bien,  de  modo  que  quede  de  buen 
color;  se  pone  en  la  lumbre  hasta  que  este*  espeso  como  ato- 
le; se  aparta  y  ya  que  esté*  frío  se  rebana  mamón  y  se  em- 
papa en  almíbar  de  medio  punto  y  bastante  vino;  se  pone 
una  capa  de  huevo  y  otra  de  mamón  y  asi  va  siguiendo  sien- 
do la  .última  de  huevo,  echándole  encima  canela,  pasas,  al- 
mendras, pifiones  y  acitrón. 


m 

1,791.  Ante  de  mamey.— &•  muele  el  mamey  y  ee  echa 
en  el  almíbar  á  aeis  hervores,  ae  echa  vino  blanco,  ene  olores, 
pasa»,  almendra*  y  ajonjolí;  ae  echa  sobre  mamón. 

1 ,793.  AnU  de  pepita.  — £1  almíbar  se  echa  de  medio  pon- 
to, la. pepita  se  limpia  y  se  laya  muy  bien;  á  una  libra  de 
pepita  cuatro  onzas  de  almendra  martajada  y  la  pepita  bien 
remolida;  hecho  el  almíbar  de  medio  punto  se  cuece  y  es- 
pesa lo  que  uno  quiere;  se  le  echa  su  Tino  y  todos  sus  olo- 
res; se  va  poniendo  una  capa  de  mamón  y  otra  de  esta  pas- 
ta, se  le  echa  pastilla  por  encima. 

1.793.  Ante  dé  paeas. — A  un  cuartillo  de  vino  tinto  se  le 
echa  una  poca  de  azúcar  y  media  libra  de  pasas  deshuesa- 
das; se  rebana  mamón  y  cada  capa  se  le  va  echando  hasta 
que  quede  empapado;  se  le  echa  canela. 

1.794.  Ante  dé  naranja.  -En  zumo  de  naranjas  maduras 
se  echa  aguardiente  y  azúcar  hasta  que  esté*  agri-dulce;  lúe* 
go  se  echa  mamón  hasta  que  beba  el  caldo,  luego  se  guar- 
nece con  ocho  huevos  Miados,  echándole  por  encima  pasti- 
lla y  grajea. 

1 ,796.  Ante  de  coco,  arroz  y  almendra.  — Se  hace  arroz  con 
leche  de  un  dia  para  otro;  luego  pasta  de  almendra  y  pasta 
de  coco;  se  baten  unos  huevos  y  se  unta  una  cazuela  con 
manteca;  se  echa  capa  de  arroz,  capa  de  coco  y  capa  de  al- 
mendra, y  á  cada  una  de  estas  una  de  huevo,  y  echadas 
cuantas  quisieren  se  cuece  á  dos  fuegos,  agregándole  almí- 
bar, pasas  y  lo  demás  que  quisieren. 

1 ,796.  AnU  de  camote  y  pitayó.  — El  camote  blanco  y  que 
no  este*  hebrudo  se  cuece,  se  muele  bien  en  un  metate,  y 
estando  el  almíbar  de  medio  punto  bien  clari6cada,  se  re- 
vuelve  el  camote;  ya  que  haya  dado  unos  hervores  se-le  echa 


173 

una  poca  de  pitaya  hasta  que  tome  color,  y  una  poca  de  agna 
de  azahar,  se  pone  á  la  lumbre  hasta  que  tomé  cuerpo;  des- 
pués se  ponen  capas  de  mamón  rociadas  con  vino  y  almíbar, 
y  otra  de  esta  pasta,  se. clavetean  con  pasas  y  almendras, 
guardando  el  método  de  poner  á  dos  libras  de  camote  tres 
de  azúcar. 

1.797.  Ante  de  camote  y  pifa. — A  una  libra  de  camote 
una  de  pifia,  bien  remolidas  las  dos  cosas,  se  le  echan  tres 
libras  de  azúcar  haciendo  el  Almíbar  primero,  y  luego  se  le 
revuelve  la  pasta  para  ponerlo  á  la  lumbre  hasta  que  tome 
el  punto  regular,  y  se  van  poniendo  capas  de  mamón  como 
en  la  anterior. 

1 .798.  Ante  de  avellana  y  piñón.  — A  una  libra  de  avellana 
y  otra  de  piñón,  libra  y  media  de  azúcar;  se  hace  el  melado 
primero  bien  clarificado,  se  muele  pjfion  y  avellana  las  dos 
cosas  juntas,  se  desbarata  en  el  almíbar;  ya  qué  haya  dado 
unos  hervores  se  le  revuelve  media  onza  de  canela  en  polvo 
y  un  poco  de  vino  Jerez,  y  así  qu¿  ya  esté*  de  punto  se  pone 
una  capa  de  mamón  y  otra  de  pasta,  rodándola  como  las 
otras;  se  adorna  con  pasta,  almendras  y  pasas. 

1.799.  Ante. — A  una  libra  de  huevo  otra  de  azúcar  y  una 
onza  de  canela:  luego  á  tres  libras  de  almíbar  clarificada  y 
en  la  proporción  que  se  dijo,  se  deja  hervir  hasta  el  punto 
de  cajeta,  y  en  el  almíbar  de  medio  punto  se  moja  mamón 
y  se  pone  una  capa  y  otra  de  huevos,  se  adorna  con  pasas  y 
almendras.  Al  almíbar  en  que  se  moja  el  mamón  se  le  echa 
vino  de  Jerez. 

1.800.  Ante  de  pepita. — Se  lavan  las  pepitas  que  no  se  les 
caiga  nada  de  lo  verde,  se  muelen  bien,  se  echan  en  el  al- 
míbar de  buen  punto  y  se  menea  como  para  pan  no  muy  es* 

LA  OOOINBRA  POBLANA.— TOM.  I*. — 12. 


174 

peso,  y  se  le  echa  Tino,  bastante  olor  y  56  van  {Hiñiendo  las 
capas  de  mamón  con  todos  sus  adornos. 

*  1,801.  Jerieaüa. — A  cada  tasa  de  leche  cuatro  yemas  de 
huevo  quitándole  lo  blanquito.  Se  hierve  muy. bien  y  al  her- 
vir se  le  echa  el  azúcar  y  una  raja  grande  de  canela  y  sigue 
hirviendo  hasta  que  espese.  Se  aparta  de  ta  lumbre  y  se  si- 
gue meneando  para  que  no  críe  nata.  Ya  que  está  fría  se 
miden  las  tazas  y  se  le  echan  las  yemas,  se  deshacen  muy 
bien  con  la  cuchara,  se  cuelan  y  se  ponen  á  cocer  en  baño 
de  María.  Para  saber  si  ya  está  se  le  mete  un  popote  y  cuan- 
do sale  limpio  ya  está  y  se  deja  en  la  cazuela  hasta  que  se 
enfríe  un  poco  el  agua,  se  saca  y  se  cubre  la  cazuela  con  un 
lienzo  para  que  no  se  reviente. 

1 .802.  Leche  de  pina.  — Se  eoje  un  poco  de  arroz  y  se  tues- 
ta en  el  comal,  se  muele  la  pifia  primero  sin  cascara  bien 
remolida,  y  luego  con  el  arroz  molido  se  revuelve  y  se  cue- 
la, se  pone  á  hervir  hasta  que  esté*  de  punto. 

1.803.  Leche  antonina. — Se  limpia  la  almendra  y  se  tues- 
ta en  comal  hasta  que  quede  bien  dorada,  y  lo  mismo  el  ar- 
roz, pero  sin  lavar:  á  una  libra  de  almendra  media  de  arroz, 
y  esto  muy  remolido,  se  cuela  con  la  misma  leche  y  se  le 
echa  la  azúcar  y  la  lache  competente,  se  muele  una  poca  de 
canela  y  se  le  revuelve  á  la  leche  antes  de  ponerla  en  la  lum- 
bre, y  ya  que  está  de  medio  punto  se  le  echa  agua  de  azahar 
y  se  deja  hasta  que  esté  de  punto  alto. 

1.804.  Leche  amarilla.  — Según  la  cantidad  de  leche  se 
lava  un  poco  de  arroz  y  se  remuele  mucho,  y  se  cuela  con 
la  leche;  se  le  echa  azúcar  al  gusto,  se  le  van  desbaratando 
yemas  de  huevo  hasta  que  se  ponga  amarilla,  se  pone  en  la 
lumbre,  así  que  está  de  medio  punto  se  le  echa  una  poca  de 


176 

agua  de  azahar,  y  se  deja  en  la  lumbre  hasta  que  esté  de 
punto  que  es  cuando  se  echa  en  un  plato  y  se  levanta. 

1.805.  Leche  episcopal — Se  pone  á  hervir  la  leche,  y  ya 
que  está  espesando  se  le  echa  dulce  al  gusto  y  olor,  se  mide 
en  tazas,  y  á  cada  una  se  le  echan  tres  yemas  de  huevo,  y 
ya  que  está  fría  se  vuelve  á  poner  á  la  lumbre  hasta  qué  es- 
pese y  se  vuelve  á  echar  en  las  tazas,  con  soletas  enteras  por 
dentro. 

1.806.  Leche  crema. — Para  un  platón  seis  onzas  de  hari- 
na, veinte  yemas  de  huevo,  la  leche  competente  y  el  dulce 
al  gusto;  se  revuelve  todo  esto  en  la  leche  y  se  desbarata 
con  la  mano,  se  pasa  todo  por  un  cedazo  y  se  pone  al  fuego, 
se  pelan  dos  limones  y  se  le  echan  las  cascaras  ya  que  este* 
hirviendo  y  una  raja  de  canela;  el  punto  es  de  manjar  blan- 
co, y  ya  puesto  en  el  platón  que  esté  frío,  se  le  echa  azúcar 
por  encima  y  se  quema  con  una  plancha. 

1.807.  Leche  de  chabacano. — A  cada  cuartillo  de  leche 
endulzada  al  gusto,  Be  le  echan  nueve  chabacanos,  estos 
de  los  mas.  maduros  y  dulces,  *e  muelen  junto  con  un  poco 
de  arroz;  se  le  revuelve  á  la  leche  y  se  cuela  en  un  cedazo, 
se  le  da  punto  regular;  y  si  es  para  cajeta  entonces  no  se 
cuela,  no  mas  sé  remuele. 

1.808.  Leche  quemada, — Se  revuelve  la  leche  con  yemas 
de  huevos  á  que  tome  color;  se  le  echa  un  poco  de  almiáon 
y  azúcar,. una  cascarita  de  limón  enjugada,  almendras  mar- 
tajadas  y  se  pone  á  hervir  y  en  tomando  punto  de  jeriealla 
se  baja,  y  se  echa  en  un  platón,  un  polvo  de  azúcar  por  en- 
cima y  con  un  fierro  se  quema  por  encima. 

1.809.  Leche  guinea. — Para  un  platón  diez  y  ocho  pláta- 
nos guineos  se  muelen  muy  bien,  treinta  yemas  de  huevos 


176 

y  ana  libra  de  asacar,  en  leche  competente,  todo  ee  cuela  y 
te  pone  á  hervir  con  canela  hasta  que  tome  punto  regalar. 

1.810.  Leche  morada.—  8e  endulza  la  leche  al  paladar,  ae 
cuece  el  camote  morado,  y  ae  remuele  con  un  poco  de  arrot; 
ae  revuelve  en  la  leche  y  ae  cuela  con  una  coladera,  ae  po- 
ne á  cocer  con  una  raja  de  canela,  y  el  punto  ea  como  el  de 
todoe. 

1.811.  Leche  cocada.— A  una  libra  de  asnear  clarificada 
que  caté  de  punto  alto,  ae  le  echa  un  coco  remolido,-,  te  in- 
corpora ain  apartarlo  de  la  lumbre,  y  aef  que  ceta  de  punto 
de  bocadillo  ae  le  echan  dos  cuartillos  de  leche  y  sigue  hir- 
viendo haata  que  despega  del  caso;  se  apea,  y  mientras  se 
enfria  un  poco  ae  baten  doce  yemas  de  huevo  y  junto  á  Is 
lumbre* se  le  echa  y  se  vuelve  á  poner  á  que  siga  hirviendo** 
fuego  manso,  revolviéndola  bien  hasta  que  cuaje  el  huevo: 
se  le  pone  un  comal  con  rescoldo  por  encima  para  que  dore. 

1.812.  Leche  parda.  ¿—Se  ponen  á  cocer  cuatro  cuartillo! 
de  leche,  se  le  echan  ocho  yemas  de  huevo,  el  dulce  al  gus- 
to, se  cuela  y  se  pone  á  la  lumbre;  se  le  echa  una  cascan 
de  limón  y  asi  que  está  de  medio  punto  se  tuesta  media  on- 
za de  almendras  y  se  muele  con  cascara,  y  un  poquito  df 
almidón;  una  onse  de  canela  remolida,  y  ya  que  está  pan 
tQmar  punto,  que  es  de  manjar  blanco,  se  le  va  echando  e 
polvo  de  canela  con  cuidado  para  que  no  se  haga  bodoques 

1.813.  Arroa  en  topa  con  leche. — Después  de  bien  lavado 
se  hace  cocer  en  suficiente  cantidad  de  leche,  y  se  sasom 
con  sal  6  con  asnear,  según  el  gusto  de  cada  uno,  sirviendo 
lo  al  momento;  hay  que  tener  cuidado  de  menearlo  á  menú 
4o;  también  puede  hacerse  con  leche  de  almendras;  pe* 


177 

téngase  presente  que  se  necesita  un  cuarterón  de  almendra* 
amargas  para  hacer  dos  cuartillos  do  leche. 

1.814.  Arroz  m  torrejas. — Cuezate  arroz  con  leche,  azú- 
car, un  poco  de  agua  de  flor  de  naranja,  canela  y  manteca; 
cuando  esté  cocido  se  añaden  yemas  de  huevos,,  echándolo 
en  una  cazuela  para  que  se  enfrien;  se  hacen  bolas  del  ta- 
maño de  un  huevó,  se  fríen  polvoreándolas  con  azúcar. 

1.815.  Atroz  con  leche  d  la  española. — Para  cada  cuarti- 
llo dé  leche  se  necesita  un  cuarterón  de  azúcar  refinada  y  un 
cuarterón  de  arroz.  Se  pone  la  leche  á  calentar  en  una  olla 
nueva  con  un  pedacito  de*  canela  y  unas  cortezas'  de  limón 
ó  de  naranja,  que  se  atan  con  un  hilo  fuerte  para  sacarlas 
después;  cuando  raya  á  hervir  la  leche  se  le  echa  el  arroz, 
que  estará  ya  medio  cocido  con  agua  y  sal,  y  escurrido,  y  se 
meneará  á  una  mano  sin  dejarlo,  para  que  Ja  leche  no  sa 
corte.  Se  sirve  con  azúcar  y  canela  en  polvo. 

1.816.  Arroz  con  leche  de  almendras, — Se  pelan  las  almen- 
dras en  agua  hirviendo;  para  cada  libra  de  almendras  se  ne- 
cesita una  libra  de  azúcar,  otra  de  arroz  y  dos  onzas  de  pi- 
fiones. Se  muelen  las  almendras^  los  pifiones,  y  se  hace  la 
leche,  desatando  la  masa  con  agua  fría  y  pasándola  por  un 
tamiz  fino  6  servilleta.  Puesta  la  leche  al  fuego  en  una  olla 
nueva,  se  echa  el  arroz,  que  estará  ya  medio  cocido  con 
agua  y  sal,  se  pone  la  cazuela  en  infusión  en  un  pucherito,  y 
luego  se  vierte  sobre  el  arroz.  listando  ya  éste  cocido,  se 
baten  unas  yemas  con  leche  y  se  echan  por  encima,  añadien- 
do azúcar  y  canela;  debe  conservarse  alguna  leche  por  si  se 
endurece  antes  de  servirse. 

1.817.  Arroz  can  leche. — Para  cada  cuartillo  de  leche  se 
necesita  un  cuarterón  de  azúcar  refinada  y  un  cuarterón  de 


178 

arroz.  Se  pone  la  leche  á  calentar  en  ana  olla  nueva  can  an 
pedacito  de  canela  y  anas  certezas  de  limón  6  de  naranja,, 
qae  te  atan  con  on  hilo  fuerte  para  sacarlas  después;  cuan* 
do  Taya  á  hervir  la  leche  se  le  echa  el  arni,  que  estará  ya 
medio  .cocido  con  agua  y  sal  y  escurrido,  y  se  meneará  á  una 
mano  sin  dejarlo,  para  que  i  a  leche  no  se.  corte.  Se  sirve 
con  azúcar  y  canela  en  polv  >. 

1.818.  Poetrt  de  calabaza  de  Castilla. .  — Se  clarifican  dos  li- 
bras de  azúcar,  se  muele  un  coco,  se  hierve  la  calabacita,  se 
pesa  una  libra  y  se  muele  y  ya  que  está  espeso  el  almíbar. 
se  echa  el  coco  á  que  este*  hirviendo  y  luego  se  echa  la  cala- 
baza, se  está  meneando  hasta  que  se  despega  del  cazo;  se 
voltea  en  un  platón  y  se  le  echa  canela  por  encima. 

1.819.  Poetre  de  leche. — Se  toman  veinte  cuartillos  de  le- 
che, y  á  cada  cuartillo  se  le  echan  cuatro  yemas  duras  y  mo- 
lidas, á  toda  la  cantidad  de  leche  se  le  echan  seis  onzas  de 
almendra  y  cuatro  libras  de  almidón,  y  todo  se  muele,  se 
pone  á  cocer  á  fuego  manso  sin  dejarlo  de  menear,  echán- 
dole azúcar  competente  y  agua  de  azahar,  y  se  le  da  punto 
de  manjar  blanco;  puesto  en  los  platones  se  le  echa  canela 
en  polvo  por  encima. 

1.820.  Arequipa. -r- A  seis  cuartillos  de  leche  tres  y  me- 
dia libras  de  azúcar  y  media  onza  de  almidón,  que  se  desha- 
ce en  un  cuartillo  de  leche.  £1  punto  es  el  del  agua. 

'  1,821.  Arequipa. — A  seis  cuartillos  de  leche  tres  libras 
de  azúcar  y  medio  de  almidón ;  se  pone  á  hervir  la  leche, 
después  que  hirvió  se  aparta  un  cuartillo  y  la  demás  se  en- 
dulza. Se  desbarata  el  almicon  en  el  cuartillo  de  leche  que 
se  apartó  y  se  revuelve  todc ,  se  cuela  y  sé  pone  á  la  lumbre 


179 

y  se  menea  macho.  Se  conoce  el  punto  qae  debe  tener  cuan- 
do al  echarle  un  poco  de  agua  se  puede  cojer  con  la  mano. 

1.822.  A  requipa  de  pitia.  — Se  clarifican  tres  libras  de  azú- 
car y  se  le  da  medio  punto;  se  muele  una  pina  que  estllnen 
madura  y  ha  de  quedar  remolida;  se  muele  media  libra  de 
almendra,  no  se  remuele,  pero  se  procura  que  no  quede  en* 
tera;  se  echa  en  el  almíbar  ¿que  se  cueza;  sé  desbaratan 
doce  yemas  de  huevo,  se  ponen  á  hervir  en  un  cazo,  se  apea 
de  la  lumbre  en  cuanto  se  apague  el  hervor,  y  se  va  echando 
el  huevo  paso  á  paso,  al  mismo  tiempo  que  otra  persona 
menea  sin  cesar.  Luego  se  vuelve  á  poner  ala  lumbre  hasta 
que  esté  de  punto. 

1.823.  Arequipa  de  piño.  — A  siote  cuartillos  de  leche  se 
t*chau  dos  libras  de  azúcar,  cuatro  onzas  de  almendras  y  una 
de  almidón;  cuando  ha  tomado  ya  punto  se  le  echa  otra  li- 
bra de  azúcar  y  uua  pina  molida  y  colada  por  una  servilleta. 
Se  pone  de  nuevo  á  hervir  hasta  que  tome  el  punto  que  al 
menearlo  se  vea  el  fondo  del  cazo.  Entonces  se  vacia  en  los 
cascos. 

1,814.  Arequipa  de  mamey. — A  un  cuartillo  de  leche  una 
libra  de  azúcar,  medio  mamey  que -no  sea  muy  grande,  y 
molido.  Se  echa  ¿  la  leche  cuando  ya  está  de  medio  punto. 
Si  el  mamey  tiene  hebras  se  pasa  por  un  lienzo  mezclado 
con  un  poco  de  leche. 

1,825.  Arequipa  de  almendra. — A  cuatro  cuartillos  de  le- 
che dos  libras  de  azúcar,  cuatro  onzas  de  almendra,  dos  on- 
zas de  arroz  y  media  de  pina;  se  echa  la  azúcar  en  la  leche,  des- 
pués se  ouela  en  una  servilleta  y  se  pone  á  hervir  con  una 
raja  de  canela,  luego  se  lava  el  arroz,  ae  remuele  bien,  se 
vacia  la  leche  en  un  cazo  y  se  une  con  el  arroz  colado,  y  ya 


180 

que  está  de  medio  punto  ee  le  echa  la  almendra  no  inuy  re- 
molida, y  mí  que  está  de  ponto  te  le  echa  la  pifia,  para  qne 
no  se  corte  la  leche. 

1,62o.  Otro  de  liman  real — Se  toman  limones  sin  cisca* 
ras  ni  pepitas,  se  asolean  y  se  les  moda  agoa  por  o.ho  días, 
luego  se  cuecen  y  se  rallan  y  4  ocho  libras  de  esto  se  les  echa 
cuatro  libras  y  media  de  asacar,  hecha  almíbar  clarificada; 
esto  se  tifie  con  tona  colorada  y  so  punto  de  cocimiento  es 
el  que  no  se  caiga  de  la  cuchara. 

1,837.  Otra  de  cidra. — Esa  es  lo  mismo  qoe  la  anterior, 
con  la  diferencia  qoe  4  una  .ibra  de  cidra  se  le  echa  otra  de 
azúcar,  pero  el  ponto  es  el  mismo. 

1.828.  Otra  de  haba*. — Se  pone  4  remojar  en  agoa  tibia 
una  libra  de  habas  secas,  se  limpian  y  se  ponen  en  una  ser- 
villeta para  cocerles,  luego  se  muelen  bien  y  se  deshacen  cin- 
co libras  de  azocar  en  cinco  cuartillos  de  leche  y  se  les  echa 
una  onza  de  almidón  tamizado;  esto  se  cuela  y  se  pone  4  co- 
cer con  las  habas  y  después  de  cocido  se  le  echa  ana  libra 
de  almendra  no  muy  molida  como  las  habas  y  se  le  da  el 
ponto  como  4  las  anteriores. 

1.829.  Arequipa  de  pi§a  y  leche. — A  cinco  cuartillos  de 
leche  dos  libras  de  azúcar,  cinco  onzas  de  almidón,  agua  de 
azahar  suficiente  y  todo  se  ha  de  colar;  se  pone  4  hervir  y 
conforme  4  la  cantidad  qoe  fuere  se  le  echan  una  ó  dos  pi- 
fias molidas  y  coladas,  se  echa  el  jago  y  así  qoe  se  despega 
se  echa  en  la  cajeta. 

1,890.  Otra, — A  cinco  cuartillos  de  leohe  cuatro  libras  de 
azúcar,  cinco  onzas  de  almidón,  seis  almendras  y  agoa  de 
azahar. 

1 ,831 .  Arequipa  chiquita.  — A  seis  cuartillos  de  leche  coa- 


181 

tro  libras  de  azúcar  y  cuatro  onzas  de  almidón,  seis  aliñen- 
dras  y  agua  de  azahar. 

1.832.  Aljiricalla.  — t)espues  de  bien  cocida-  la  leche  con 
una  poca  de  canela  te  le  echa  su  azúcar  para  que  se  endulce, 
después  se  mide  la  leche  con  una  taza  caldera  y  para  cada 
taza  de  leche  tres  yemas  de  huevo,  y  se  desbaratan  bien;  se 
cuela  con  un  cedazo  a  que  no  le  quede  pellejo  de  las  yemas, 
se  pone  al  vaho  de  una  olla  que  esté  hirviendo,  se  tapa  con 
un  comalito  con  rescoldo  encima,  y  así  que  se  conoce  que 
ya  está  bien  cuajado,  se  mete  un  popote,  y  en  saliendo  lim- 
pio ya  está  bien  cocido  y  nada  mas. 

1.833.  Hnevoé  portugueses.  —A  cinco  libras  de  azúcar,  diez 
y  seis  yemas  de  huevos  batidas  y  libra  y  media  de  almen- 
dra tostada  y  no  muy  remolida,  dos  cuartillos  y  medio  de 
leche,  dos  onzas  de  arroz  remojado  y  molido,  onza  y  media 
de  mantequilla  y  un  pocilio  de  vino  de  Jerez  y  canela  en 
polvo,  y  ya  clarificada  la  almíbar  y  fría  se  le  echan  las  ye* 
roas,  y  á  fuego  lento  da  el  primer  hervor  y  luego  se  le  echa 
lumbre  para  que  siga  hirviendo,  y  con  la  leche  se  revuelve 
la  almendra  bien  á  que  no  le  queden  bodoquitos.  Ya  que 
va  espesando,  se  le  echa  la  mantequilla,  el  vino  y  la  canela, 
se  le  da  punto  suave  y  se  echa  en  el  platón;  se  adorna  con 
piñones,  almendras  y  canela  en  polvo. 

1.834.  Huevos  poblano*. — A  una  libra  de  azúcar  clarifica- 
da, doce  yemas  de  huevo,  se  baten  como  para  torrejas  y  ya 
que  está  el  almíbar  de  punto  alto,  se  apea  el  cazo  hasta  que 
se  enfrie;  se  echan  las  yemas,  se  revuelve  y  se  pone  al  fue- 
go manso  á  que  dé*  unos  hervores  y  se  está  meneando;  lue- 
go se  apea  y  se  bate  con  la  cuchara;  ya  que  este*  se  echa  en 


182 

loe  Tatos  7  polvo  de  canela  por  encima.  £1  almíbar  se  hier- 
ve con  unas  rajas  de  canela. 

• 

1.836.  Huem*  rétUno*. — Se  ponen  á  ooeer  los  huevos  en 
agua,  se  mondan  y  se  parten  por  en  medio  a  lo  largo,  las  ye- 
mas se  amasan  con  azúcar,  pimienta  y  mocha  canela,  que 
queden  dulces,  y  se  rellenan  los  huevos,  se  cierran  bien,  se 
baten  huevos  y  se  echa  una  poquita  de  sal;  se  fríen,  oomo 
chiles  y  si  se  pelan  se  vuelven  á  freír;  el  almíbar  ha  de  her- 
vir con  agua  de  azahar  y  que  quede  espesito;  se  enmielan, 
se  echan  en  el  platón  y  por  encima  azúcar,  canela  y  al- 
mistle. 

1 ,838.  Huevos  moles.  — A  cinco  libras  de  azúcar  clari6cada 
y  fría,  se  le  echan  cien  yemas  de  huevo,  se  vuelve  á  colar 
y  se  le  echan  tres  libras  de  almendra  molida  y  se  pone  á  co- 
cer á  fuego  manso  y  se  menea  apretado  por  todas  partes: an- 
tes que  tome  punto  se  le  echa  tantita  agua  de  azahar,  se 
echa  en  un  platón  y  estando  frío  se  le  echa  canela  por  en- 
cima. 

1.837.  Huevos  de  torprtsa. — Hágase  un  pequeño  agujero 
en  un  huevo  con  la  puntn  de  un  cuchillo,  deslíase  la  yema 
con  una  aguja  gorda,  á  fin  de  que  se  pueda  vaciar.  Habién- 
dosela sacado  toda,  se  llena  esta  cascara  con  la  crema  que 
se  quiera  por  medio  de  un  embudo,  sea  crema  de  vainilla, 
limón,  chocolate,  6  de  varias.  Coloqúese  el  huevo  6  hue- 
vos en  hueveras  para  ponerlas  en  una  cacerola,  donde  se 
puedan  bañar  los  huevos  hasta  su  mitad.  Háganseles  tomar 
el  baño  dd  María,  láveseles,  y  sírvanse  en  una  servilleta  co- 
mo huevos  pasados  por  sgua;  se  les  puede  llenar  también 
de  manjar  blanco  6  de  cualquiera  jaletina,  que  puede  oer- 


183 

rarse  por  medio  de  la  cola  de  pescado,  colocando  los  huevos 
sobre  el  hielo. 

1.838.  Huevos  de  nieve. — Se  bate  una  docena  de  claras 
de  huevo,  se  añade  azúcar  en  pqlvo  y  fgua  de  flor  de  naran- 
ja. Las  yemas  se  desatan  con  leche  y  con  flor  de  naranja 
en  garapiña  y  azúcar  en  polvo;  y  hechos  estos  preparativos, 
se  hace  hervir  en  dos  cuartillos  de  leche  con  azúcar,  y  al  mo- 
mento en  que  hierva  se  toma  de  los  huevos  batidos  en  una 
cuchara  y  se  echan  en  la  leche,  dejándolo  por  un  minuto, 
fisto  se  repito  hasta  que  se  haya  acabado  todo;  se  retira  la 
leche,  y  entonces  se  echan  las  yemas  y  se  menea  continua- 
mente para  echarlo  todo  sobre  los  huevos. 

1.839.  Huevos  espirituales. — Bátanse  en  una  taza  dos  ye- 
mas de  huevo,  y  poco  á  poco  se  va  echando  vino  ó*  aguar- 
diente muy  caliente;  añádase  azúcar  blanca  en  polvo;  báta- 
se muy  bien  y  póngase  un  polvo  de  canela,  y  al  llenarse  la 
taza  se  puede  beber. 

1,840.-  Huevos  moles. — A  tres  libras  de  azúcar  clarificada 
se  le  echan  doce  yemas  de  huevo,  el  almíbar  ha  de  estar  es- 
pesa y  fría,  vino,  canela,  clavo,  revuelto  esto,  se  le  echa  á 
la  almíbar  y  se  vuelve  á  hervir;  ya  espeso  se  pone  una  ca- 
pa de  mamón  y  otra  de  huevos;  luego  se  clavetea. 

1,841.  Buevitos  de  faltriquera.  —A  media  libra  de  azúcar 
hecha  almíbar  clarificada  de  medio  punto  se  le  echan  diez 
y  seis  yemas  de  huevo  batidas  y  se  pone  al  fuego  meneán- 
dolo sin  cesar;  se  le  da  el  punto  de  que  se  despegue  del  ca- 
zó. También  puede  hacerse  echándole  leche  en  lugar  de 
agua  y  algunas  almendras  bien  molidas.  Se  da  á  la  masa 
la  forma  de  huevitos,  que  se  envuelven  en  azúcar  en  polvo, 


1*4 

y  así  que  m  kan  enfriado  ae  ponan  an  papelea  separada- 
mente. 

1,843.  Manjar  blanco.— A  treinta  y  doa  cuartillos  de  le* 
che  trae  librea  de  artos,  ana  cuarta  de  asacar;  ae  toma  eata 
leche  y  ae  echa  en  el  caso  oon  el  asacar,  y  ae  cuela  con  ana 
servilleta;  ae  lava  el  artos  y  ae  pone  á  secar  al  sol,  y  después 
ae  muele  en  seco  y  se  cierne  por  un  tamil,  y  se  va  revolvien- 
do con  la  leche;  ae  pone  al  fuego,  y  ee  le  echa  una  pechuga 
de  gallina  deahebrada,  y  aaf  que  está  de  punto  ae  le  echa 
una  pora  de  agua  de  asahar  y  ana  olores;  para  conocer  él 
punto  ae  echa  en  un  platón,  y  aaf  que  ae  despega  ya  está. 

1.843.  Manjar  Sevillano. — A  una  pechuga  de  gallina, 
treinta  cuartillos  de  leche,  sesenta  jemas  de  huevo,  ana  li- 
bra de  almendra  martajada,  siete  libras  de  azúcar,  doa  y  me-, 
dia  libras  de  arros  molido  y  cernido,  y  estando  hirviendo 
ae  le  echa  media  libra  de  mantequilla  bien  rebanada  y  fres- 
ca; el  punto  ha  de  aer  de  manjar  blanco  y  se.  le  echa  agua 
de  asahar. 

1.844.  Sol  dorado. — A  un  cuartillo  de  leche,  doce  yemas 
de  huevo  y  el  dulce  al  guato,  agua  de  asahar  y  un  poco  de 
almidón  meneándolo,  ae  cuece  hasta  que  quede  como  atole 
espeso;  ae  pone  en  el  platón  una. capa  de  mamón  y  otra  de 
ajonjolí  tostado;  por  encima  almendra,  acitrón  y  canela. 

1.845.  Carne  de  membrillo. — Después  de  esourrido  el  ja- 
go, el  residuo  que  queda  en  el  tamis  ae  mésela  con  asnear 
en  polvo,  ae  amasa  y  aplana  pon  el  rodillo,  y  cortado  con  el 
borde  de  un  vaso  vuelto  boca  abajo,  oolocando  estos  círcu- 
los sobre  un  papel  para  ponerlos  á  asar  eñ  el  horno,  y  tenién» 
doloa  doce  horas  en  el  horno  so  envuelven  después  en  papel 
y  ae  meten  en  tarros. 


185 


DULCERÍA. 

*  1,846.  Chico  zapote  cubierto. — Mondado  de  manera  que 
no  le  quede  cosa  amarga,  se  pone  á  cocer  á  fuego  manso  á 
que  no  hierra  el  agua;  preparada  el  almíbar  se  echan  los 
chicos  á  que  den  un  hervor,  se  quitan  y  dejan  reposar  en  el 
dulce  hasta  el  otro  dia,  que  se  le.  da  otro  hervor  y  reposa 
hasta  el  otro  dia  en  que  se  da  el  último  hervor.  Después  se 
sacan  á  que  se  sequen  y  se  eclian  en  almíbar  que  esté  de 
punto.  Se  ponen  en  la  lumbre  hasta  que  dan  punto  de  ve- 
jiga; entonces  se  sacan,  se  escurren,  se  bate  el  almíbar  y  se 
les  echa  encima  6  se  revuelcan  en  la  miel  á  que  queden  bien 
cubiertos  de  dulce. 

*  1,847.  Queso  de  Ñapóles. — A  cuatro  cuartillos  de  leche, 
dos  onzas  de  almendra  molida  y  media  libra  de  azúcar  blan- 
ca. Se  pone  á  cocer  la  leche  y  después  se  le  revuelve  la  al- 
mendra y  azúcar  y  se  pone  á  hervir  hasta  que  espese  como 
para  postre.  Subido  de  punto  se  vacia  á  que  se  enfrie  bien; 
se  baten  diez  y  seis  claras  de  huevo  y  se  revuelven  bien  con 
la  leche,  se  unta  el  molde  con  mantequilla  y  se  pone  á  cocer 
como  la  jerícalla  en  agua  y  con  lumbre  arriba. 

*  1,848.  Marqueaote  de  rosa. — Se  clarifica  el  almíbar  y  se 
baten  claras  de  huevo.  A.  cada  libra  de  almíbar  se  le  echan 
dos  claras  y  se  baten  hasta  que  estén  muy  duras.  £1  punto 
del  almíbar  ha  de  ser  casi  de  melcocha.  Para  cada  libra  de 
azúcar  el  zumo  de  un  limón,  que  se  echa  cuando  está  de 
punto,  que  será  cuando  metiendo  el  dedo  en  el  agua  fría 
forme  un  dedal.  Entonces  se  aparta  y  se  le  echa  la  rosa  y  á 
fuerza  de  brazos  se  bate  mucho,  se  pone  en  el  molde  y  se  le 


180 

echa  grajea  por  encima.   La  rota  ae  echa  al  guato  de  cada 
uno. 

1.849.  Cafiroleta.— A  una  libra  de  acucar  clarificada,  ae 
le  echan  seis  yemas  de  huevos  batidas,  y  ya  que  está  hir- 
viendo ae  le  echa  un  coco  limpio  y  bien  molido;  ae  le  expri- 
me una  naranja  dulce,  y  ae  le  da  el  punto  de  huevos  por- 
tugueses. 

1.860.  Otra  cafiroleta. — Quítese  primeramente  la  pelícu- 
la que  tiene  el  cuco  unida  á  la  almendra;  rállese  ésta,  pón- 
gase en  almíbar  un  poco  clara  y  arrímese  al  f  negó  para  dar- 
le punto;  anidase  panetela  empapada  en  vino  seco  y  yemas 
de  huevo  batidas;  se  deja  un  rato  corto  ala  lumbre  y  se  me- 
nea bien;  sacase  en  platos  expolvoreándola  con  canela. 

1.861.  Piñonate. — Se  clarifican  dos  libras  de  azúcar  y  se 
le  echan  seis  yemas  de  huevo;  se  pone  á  que  dé*  unos  her- 
vores, y  luego  se  le  echa  media  libra  de  piñón  molido  y  un 
requesón  molido;  todo  se  revuelve  y  se  le  echa  un  polvo  de 
canela  y  se  le  da  punto  de  cajeta. 

1.852.  Jalea  de  grosella*. — Se  mezclan  bien  y  se  compri- 
men en  un  lienzo  seis  libras  de  grosellas  encarnadas,  tres 
de  blancas  y  una  de  frambuesas,  sacando  todo  el  jugo  posi- 
ble. Luego  se  pone  este  zunrio  al  fuego  en  uu  caldero,  aña- 
diendo una  libra  de  azdcar  por  cada  libra  de  zumo,  y  cuan- 
do hubiese  hervido  y  tomado  una  regular  consistencia,  se 
pasa  por  tamiz,  se  llenan  los  vasos,  6  bien  tarritos,  y  se  de- 
jan expuestos  al  aire  por  algunos  dias  en  un  sitio  seco. 

1.853.  Jalea  de  teiocote. — Se  cuecen  y  mondan  los  tejoco- 
tes  y  después  se  echan  en  agua  hirviendo;  se  tapa  la  olla  y 
se  ponen  al  sereno  dos  6  tres  dias,  pasados  los  cuales  se  cue- 
la y  endulza  con  azúcar  blanca.    Se  pone  á  hervir  luego  á 


187 

fuego  lento  para  que  no  se  ponga  colorada  y  se  le  da  el  pan* 
to  de  espejo.  A  ana  libra  de  azúcar  le  corresponde  un  cuar- 
tillo de  jalea. 

1,854.  Jaita  de  membrillo. — Se  parten  los  membrillos  lo 
mismo  que  para  la  mermelada,  se  ponen  á  cocer  3*  á  otro 
día  se  ponen  anos  pocos  en  un  trapo;  se  exprimen  y  se  si- 
gue naciendo  esto  con  los  demás.  Una  vez  exprimidos  se 
mide,  por  tres  cuartillos  de  jalea  una  libra  de  azúcar.  El 
punto  del  almíbar  lo  mismo  que  la  mermelada;  en  este  pun- 
to se  echa  la  jalea  y  cuando  espesa  en  la  cuchara,  si  se  sube 
se  apea  de  la  lumbre  y  se  soplaron  un  aventador;  se  le  qui- 
ta la  espuma  con  una  cuchara;  luego  se  vacia. 
,  1,855.  Jalea  de  zarzamora. — Se  cuece  una  libra  de  zarza* 
mora  y  se  deja  por  tres  dias  al  sereno  y  á  la  sombra.  Se  me- 
nea diariamente  con  una  cuchara,  se  cuela  al  tercer  dia  por 
una  servilleta.  Se  clarifica  una  libra  y  diez  onzas  de  azúcar 
mediana  y  de  punto  de  bolita;  se  le  incorpora  el  caldo  de  la 
zarzamora  caliente,  pues  fria  perderia  el  color;  se  deja  que 
tome  el  punto  de  jalea  aunque  no  quede  de  corte;  pero  en 
tiempo  de  tejocotes  se  le  agrega  un  cuartillo  de  jalea  y  dos 
libras  de  azúcar  para  que  quede  de  corte.  Se  coloca  después 
en  vasos. 

1.856.  Jalea  de  camote. — El  morado  se  muele  y  sé  revuel- 
ve con  competente  pina  molida;  se  hace  almíbar  de  medio 
punto  y  en  ella  se  exprimen  por  una  servilleta  el  jugo  del 
camote  y  pifia  molida,  se  le  echa  olores  y  da  punto  de  jalea. 

1.857.  Jalea  de  monacillo. — Se  les  quita  el  caequillo  ver- 
de y  el  tallito  de  enmedio,  se  deshojan,  se  hace  el  almíbar 
con  el  mismo  punto  y  se  le  echan  algunos  monacillos  des* 
hojados  para  que  le  dé  color  y  se  le  queden;  en  una  poca 


188 

que  m  aparta  se  hierren  loa  demáa  monacilloa;  «atoa  ae  expri- 
men con  aerrillota  en  la  demáa  almíbar  y  hierre  haata  el 
punto  de  jalea  con  sus  olores. 

1,868.  Jalea  dé  jitomate, — Se  haca  lo  mismo,  con  los  ji- 
tomates muy  colorados  y  macizos. 

1,859.  Jalea  de  nva. — Se  hace  lo  propio  dejándole  algu- 
nos huesillos  que  le  agracien,  algunoa  ollejitns  que  le  drn 
gusto,  uvas  enteras,  guindas  en  conserva  6  cubiertas,  higos, 
limoncitoa  y  tejocotes  6  trocillos  de  frutas  cubiertas. 

1,880.  JáUa  dé  manzana*. — Elíjanse  de  las  mejores  man- 
zanas, y  deapuea  de  peladaa  y  partidas  se  lea  quita  el  cora- 
son  ;  ae  ponen  al  fuego  en  una  vasija  con  suficiente  cantidad 
de  agua  haata  que  quedé  muy  espesa;  después  se  echa  dh 
un  lienzo  limpio  y  se  deja  escurrir.  8e  pone  en  una  vasija 
una  libra  de  azúcar  por  libra  de  manzanas  cocidas;  ae  echa 
en  loa  botes  y  ae  cubren  con  cortezas  de  limón  confitada 
Por  de  pronto  se  cubre  con  un  papel  simple,  mojado  en 
aguardiente,  y  doa  días  después  con  otro  papel  blanco  para 
conservarlos  en  un  sitio  freso»,  pero  sin  humedad. 

1,861.  Met  melada. — Se  ponen  á  cocer  membrillos,  se  les 
quitan  las  cabezas  y  ae  ponen  á  escurrir;  luego  ae  cuelan  en 
una  servilleta  limpia  refregándolos  con  la  mano  y  se  le  eehan 
dos  cucharadas  de  jalea;  para  sacar  ésta  se  muelen  loa  cora- 
zones de  loa  membrillos,  y  á  dos  libras  de  azúcar  se  le  echa 
una  de  membrillo  y  una  manzana  colada  por  la  servilleta. 
Al  almíbar  se  le  dá  punto  de  melcocha  subido,  se  saca  de  la 
lumbre  y  de  un  modo  violento  se  le  agrega  el  membrillo;  se 
bate  hasta  que  se  deshace,  se  le  echan  dos  cucharadas  de 
jalea,  ae  vacia  en  unos  vasos  y  se  ponen  tres  días  al  sol,  pa- 
sados loa  cuales  ya  se  puede  comer. 


189    . 

1,802.  Oktu  mermeUtdu  de  nwHbriUo.  — Be  parten  los  maus» 
brillos  en  cuarterones,  se  les  quitan  los  corazones  y  se  cue- 
cen á  parte  una  cosa  de  la  o*ra:  ya  cocidos.se  pasan  por  ta- 
miz, separadamente  so  pasan  por  tamiz  manzanas  y  se  cáela 
la  jalea  de  los  corazones:  para  cada  libra  de  membrillo  se 
l>one  una  onza  de  manzana,  un  poco  menos  de  un  pocilio 
de  jalea  á  dos  libras  de  azúcp.r  clarificada;  todo  esto  menos 
fcl  membrillo,  se  hierre  á  un  fuego  regular,  porque  si  no  se 
azucara.  Estará  de  punto  cuan  \a  echando  unas  cucharadas 
en  el  agua  se  saquon  hechas  una  bola;  entonces  se  le  incor- 
pnra  ol  membrillo,  se  baja  déla  lumbre  para  desbaratarlo 
y  ya  que  se  enfrió  se  vacía  el  membrillo;  luego  qué  cuecen 
se  les  quita  el  agua  porque  si  no  se  cuajan  pronto.. 

1.863.  Mermelada  de  cambra  y* — Se  clarifica  una  arroba 
de  azúcar  bien  clarificada;  se  cuela  y  se  pone  á  tomar  punto 
bien  alto,  de  manera  que  haga  hebras  con  el  dedo,  entonces 
te  apea  el  cazo  y  se  pone  á  reposar  un  poco;  se  cuecen  mem- 
brillos enteros  con  cascara;  *e  cuelan  por  una  servilleta,  se 
pesan  diez  libras  y  se  echan  en  almíbar;  ya  que  está  bien 
deshecha  lá  masa  en  el  almíbar,  se  pone*  de  nuevo :el  cazo  á 
la  lumbre  y  se  deja  hervir  un  foco  de  manera  que  no*  que- 
de de  punto  muy  alto;  se  apoa.  se  bate  un  poco  y  se  echa 
«n  las  cajetas. 

1.864.  Recela  de  mermelada. — Se  clarifican  dos  libras  de 
azúcar  con  limón;  se  le  da  punto  de  caramelo  y  ya  que  está 
se  baja  de  la  lumbre';  cuando  haya  enfriado  un  poco  se  le 
«cha  una  libra  de  membrillo  y  dos  manzanas,  todo  cocido 
y  cernido  por  cedazo;  se  está  batiendo  bien  hasta  que  incor- 
pora en  el  almíbar  sin  ponerlo  a  la  lumbre;  ya  que  se  ha 

XA  OOCINSRA  FÓHLAHA. — T0M.    H — 13. 


*      190 

incorporado*,  se  ©chafen  Vidrio  6  trasto  vidriado  y  «a  po- 
ne al  sol  para  que  blanquee;  dará  hasta  nn  aft».' 

1,866.  Mermelada. — Se  cuecen  membrillos  sin  cascara  ni 
corazón,  se  muelen  y  se  oiernen  por  un  cedazo  de  cerda,  lue- 
go se  toman  dos  libras  de  estos  y  se  les  echa  tres  libras  de 
asacar  machacada  en  un  cazo  y  se  pone  al  fuego  hasta  que 
tome  el  punto  de  despegarse  en  el  agua,  entonces  se  quita 
del  fuego  y  sé  bate  sin  empañicarlo;  se  echa  tibio  en  los  cas- 
eos;  del  mismo  modo  se  hacen  los  duraznos  y  manzanas,  pe- 
ro los  duraznos  se  muelen  bien  y  á  cada  libra  y  media  se  le 
echa  una  libra  de  azúcar,  y  el  punto  el  que  se  despegue  del 
caso  y  no  caiga  de  la  cuohara. 

1,866.  Mermelada  ó  eoneerva  de  membrillo*.— Se  toman 
los  membrillos  mas  maduros,  se  les  corta  en  cuatro  pedazos, 
se  ouecen  bien  y  se  pasan  por  tamiz.  Se  pone  en  una  vasija 
libra  de  azúcar  por  libra  de  zumo,  se  clarifica,  se  añade  el 
jugo  y  se  deja  hervir  por  un  rato  para  después  ponerlo  en 


1,867-  Mermelada  de  ciruela*. — Se  cuecen,  quitando  an- 
tes los  huesos;  observando  la  misma  regla  que  para  la  an- 
terior. 

1.868.  Mermelada  de  chabaeanoe. — Se  eligen  dos  libras  de 
chabacanos  maduros,  se  les  quitan  los  huesos  y  hacen  peda- 
zos; se  pone  á  oocer  al  fuego  por  espacio  de  tres  cuartos  de 
hora;  se  añade  una  libra  de  azúcar  clarificada  y  después  la 
mitad  de  los  hueros;  cuando  este*  en  estado  de  consistencia 
se  deja  enfriar  y  se  echa  en  los  tarros. 

1.869.  Mermelada  de  captdine*.  —Después  de  quitados  los 
rabillos  y  los  huesos  á  los  capulines,  se  hacen  secar  en  una 
vasija  ¿4uego  lento  sin  dejar  de  menearlos;  se  clarifica  el 


1*1 

azúcar  y. se  echan  loe  eapolines  para  que  cuezan  lo  auficien^ 
te,  meneándolo*  á  menudo.  Para  cada  tres  libras  de  capu- 
lines se  necesitan  dos  de  azúcar.  - 

1.870.  Turrón  de  yema». — Se  clarífica  el  almíbar  y  se  le 
da  punto  de  melcocha;  á  una  libra  de  azúcar  doce  yemas  de 
huevo  bien  batidas,  se  revuelven  y  baten  como  turrón  f^e 
vuelve  á  la  lumbre  para  que  se  caliente  y  cuando  lo  está,  se 
baja  y  se  le  despolvorea  un  mamón,  se  vuelve  á  la  lumbre 
hasta  que  esté*  como  turrón.  Se  le  echa  un  poco  de  vino  y 
se  pone  en  un  platón  6  azafate  y  luego  se  come. 

1.871.  Turrón  de  Oaxaca. — A  cuatro'  libras  de  azúcar  se 
le  echa  un  cuartillo  de  miel  virgen  y  se  clarifica  junto;  se 
quita  del  fuego  en  punto  de  melcocha  y  se  le  deja  enfriar,  ya 
fria  se  le  echan  catorce  yemas  de  huevo  bien  batidas,  y  se 
vuelve  á  pasar  á  un  fuego  lento  meneándolo  sin  cesar  ó 
batiéndolo.  En  cuanto  han  cocido  bien  las  yemas  se  apar- 
ta del  fuego  y  se  le  echan  las  catorce  claras  y  se  vuelve  á 
poner  al  fuego  hasta  que  tome  punto.  Entonces  se  le  echa' 
ajonjolí  tostado,  almendra  tostada  también  y  pifiones  lim- 
pios, avellanas  y  canela  en  poívo.  Después  de  esto  se  vacia 
en  platos  ó*  cajitas. 

1.872.  Turrón.  — K  una  libra  de  azúcar,  un  pocilio  de  miel 
virgen,  se  clarifica  y  se  le  da  punto  de  bola,  se  enfria  y  se  le 
echan  diez  claras  de  huevo  sin  batir,  se  pone  á  la  lumbre 
unos  ratos  hasta  que  está  de  punto:  se  vacía  en  un  platón  y 
se  adorna  con  avellanas  y  almendras  tostadas,  pasas  y  un 
polvo  de  canela. 

1.873.  Turrón  de  almendral. — Se  baten  cuatro  claras  de 
huevo  á  punto  de  nieve,  se  pican  seis  onzas  de  almendras 
secas,  que  van  echándose  poco  á  poco  en  el  batido;  en  se- 


guida  a*  echa  poco  i  poco el  azúcar,  suficiente  para  que  la 
pasta  sea  manejable;  te  aromatiza  oon.  esencia  de,  limón,  se 
pone  en  un  molde  y  ae  deja  aecar. 

1,874.  JWtw»  de  a*eüa>«M. — 8e  hace  coiuo  el  anterior, 
sin  maa  diferencia  que  le  de  poner  avellanas  en  logar  de  al- 
mendral. 

.  1,875.  Twrron  duro  para  adornar  platones.  ^Se  tueeta  me- 
dia libra  de  azúcar,  ae  ponen  en  ella  almendra*  mondada»  y 
partidas,  ain  líquido  ninguno;  ae  meada  poniendo  sobre  una 
tabla  de  nogal  untada  de  aceite  y  pasando  sobre  de  ella  un 
palote  tarabieu  untado  de  aceite;  extendida  y  mezclada  que 
sea,  se.  corta  en  trozos  ó  tiras,  y  con  ellas  se  hacen  colum- 
nas, arcos,  trofeos  ó  cuantos  adornos  sean  neceaaríoa  para 
formar  un  ramillete;  pues  en  secándose  adquiera  una  dure* 
zaincreible. 

>\4L876.  Alegría  de  la  Habana. — A  un  coco,  dos  libras  de 
azúcar  y  una  poca  de  jicama;  nuere  yemas  de  huero,  cuar- 
tillo* y*  medio  de  leche,  media  taza  caldera  de  almendra;  se 
pone  el  coco  con  el  dulce  y  la  almendra  i  tomar  medio  pun- 
to, y  estando  ae  le  echará  la  leche  cocida  y  rebanada,  ha  ye- 
mas de  huero,  y  colocado  todo  junto  se  la  da  punto  alto  de 
cajeta;  ae  tiene  prevenida  una  tortora  untada  de  manteen  6 
mantequilla  con  un  papel  encima,  ae  Tama  el  dulce  y  aejpo* 
ne  en  una  hornilla  caliente  y  un  comal  encima  ce»  lumbre 
hasta  (pie  tome  consistencia. 

1,877.  Aborta  de  mato.  — Fórmense  las  rosea  de  loe  grano» 
del  maíz  y  ae  echan  en  el  almíbar  cuando  este*  de  punto  de 
caramelo;  déjese  un  pequeño  rato  á  la  lumbre;  se  vierte  so- 
bro una  tam>. d  »eaa  limpia,  y  cuando  se  enfrie  se  corta  en 
la  forma  d  guato  que  se  quiera,  aunque  generalmente  ae  ha- 


193 

ce  en  la  de  alfajor.  Del  mismo  modo  se  prepara  la  akgria 
de  ajonjolí.  >.-■■■ 

1,878.  Cocada  de  pifia  y  teche.— Se  clarifican  tres  libras 
de  azúcar,  se  cuelan  y  se  ponen  en  la  lumbre-  Se  tiene  un 
coco  mondado  y  rallado;  se  deja  que  la  miel  dé*  dos  6  tres 
hervores  y  se  echa  el  coco;  criando  este*  medio  espeso,  se  le 
echa  media  pifia  molida'  y  se  tiene  en  la  lumbre  hasta  que 
al  menearlo  sé  vea  el  fondo  del  cazo.  Entonces  se  bajá  y  se 

a   9 

deja  hasta  el  día  siguiente,  que  se  le  echan  seis  yemas  de 
huevo  un  poco  batidas;  se  revuelve  con  la  pasta  hasta  que 
esté  bien  di  suelta.  Sé  sube  al'  fuego  y  se  menea  sin  cesar 
hasta  que  se  vuél ve: á' ver  el  f olido  del  caso.  Entonces  se 
echa  en  los  platones  y  sé  le  pone  luego  un  comal  con  lum- 
bre para  que  dore.  ■    •■  i  . 

1*879:  '  Alfajor  dé  soco. —-Sé  disuelven  en  agua  y  al  fuego 
cinco  libras  de  asticár;  sécTarffícafel  almíbar  y  sé  cuela  mes- 
dándose  con  dbs:rcocos:'  rallados,  dejándose  en  la  lumbre 
hasta  que  tomé  púnfo  de'cónservilla,  se  le  añaden  entonces 
dos  Ó  tres  tazas  dé  biscóch'6  tostado  j  no  dejando  dé  mover- 
se después  dé  incorporado  hasta  qué  despegué  por  todos  la- 
dos'; entonces  sé  vacia  echándolo  en  una  mesa  cubierta  con 
oblea;  "rió  se  corta;  hasta  qué1  esté*  fria.  ' 

1.8&0.  Dulce  de  perón  tapado.— Se  mondan  los  perones  y 
se  echan  en  almíbar  clarificada;  así  que  se  hayan  colado  bien 
sé  sacan  y  Mí  suben  más  de  el  almíbar  para  cubrirlos  con  él, 
poniéndolos  antes  qué  sé  enfríen  en  una  coladera^  en  cuatro 
tasas  dé  óíra  almíbar  clarificada  se  echa  una  libra  de  almen- 
dra marta  jada  y  se  pone  al  fuego:  asf  q'ie  espesé  se  apartará 
para  que  repose  Un  poco,  después  se  lé  echan  Cuatro  nati- 
llas y  se  vuelve  á  poner  á  la  lumbre  a  que  tomé  el  ponto  de 


194 

despegarse  del  oaso  m  apartan  lo»  peroné*  que  eetarán  Inte' 
nos  y  ee  ponen  en  un  platón  echándoles  es$a  puta  por  enci* 
ma  hasta  cubrirlo»,  y  encima  de  ésta  ee  pone  asnearen  pol- 
vo  y  un  comal  con  lumbre  para  que  solo  se  doren;  luego  se 
clavan  A  cada  uno  dos  clavo*  y  tres  rajitas  de  canela. 

1,881 .  Fera  6*ryamota»-7-A  una  libra  de  peras  limpia*  ma- 
duras, se  echan  dos  libras  y  cuatro  onsas  de  asnear  hecha 
almíbar;  á  ésta  se  le  echa  la  tercera  parte  de  una  cuarta  de 
onsa  de  claro  y  otra  dé  canela,  todo  entero;,  dispuesta  1». 
miel  en  estos  términos,  se  pondrán,  las  peras  en  el  almíbar 
a  fuego  lento  hasta  que  se  haya  conservado  y  el  dulce  se  le» 
haya  introducido,  dejándolo»  hasta  que .  espese  mucho  y 
quede  el  almíbar  oomo  para  cubrir;  después  se  van  echando 
las  peras  y  poniéndolas  en  una  coladera  y  si  no  la  hay  e» 
un  platón  con  unos  palitos  oomo  enrejado  para  ponerla»  al 
sol  para  que  sequen  bien  y  no  escurran;  (iespuea  se  molerá» 
azúcar  y  canela;  revuelto  todo  se  pondrá- en. un  temía  y  en 
él  se  irán  revolviendo  las  peras  y  apretándolas  con  las'  ma- 
nos hasta  que  queden  bien  aprensabas,  y  cubiertas  de :  aquel 
polvo,  y  se  empapelarán  cada  una  de  por  si;  son  tan  espe- 
ciales, que.  además  de  ser  agradables,  al  gusto,  duran  un  aito 
6  mas  húmedas  como  si  fueran  hechas, de  poco  tiempo» 
- 1,882  QuayabaU  eomo  el  de  la  Habana* — Se  toman  una» 
pocas  de  guayaba»,  semondan,  se  parten  por  enmedio  y  con 
una  cuchara,»*  lea  sacan  toda»  Isa  tripas;  asechan.  ]ob  cas- 
quitos  en  agua  fría  y  las  tripa»  se  echan  en  un  trasto;, ya 
que  está  limpiarse  pesan  loa  cascos;  paca  cuatro  libras  de  gua- 
yaba, se  clarifican  cinco  libras  de  asnear  blanca;. se  toma  la 
guayaba,  de  las  cuatro  libras  una  se  parte  en  pedazos  y  las 
cvtea*  toe»  se*  muelen;  primero  se  echan  en  el  almíbar  á  que; 


195 

se  cuezan  y  dea  pues  se  muelen;  y*  que  está  de  medio  punto 
se  ciernen  las  tripas  por  un  ayate,  y  toda  la  jalea  que  ha  sa- 
lido, se  le  echa  oon  un  pocilio  de  miel  virgen;  ya  que  está 
para. tomar  punto,  se  toma  un  plátano  guineo  chico,  se  pica 
en  trocitos  y  se  le  echa;  el  punto  ha  de  ser  que  metiéndole 
la  pala  se  descubra  el  fondo  del  caso  para  que  quede  de 
buen  corte;  este  es  el  verdadero  punto  y  si  runo  quiere  mas 
bajo  se  le  puede  dar;  se  apea  y  se  le  van  echando  pnñitos 
de  azúcar  media  martajada,  cosa  de  media  libra,  que  es  lo 
mas  propio,  y  por  encima  se  le  echa,  mas  azúcar  y  en  cajo- 
nes se  echa  y  se  pone  al  sol 

1,883.  Guayabate.  —La  guayaba  ha  de  ser  verde  y  blanca 
de  color;  se  uonda,  se  le  saca  la  semilla  .y  se  muele,  se  cier- 
ne y  después  se  pesa;  á  cada  libra  de  fruta  una  de  azúcar,  j 
á  cada  cuatro  do  azúcar  medio  cuartillo  de  jaleado  tejooote, 
Al  azúcar  *e  le  da  punto  de  caramelo,  se  le  mezcla  á  la  fru- 
ta y  se  deja  hervir  hasta  que  se  lo  vea  el  fondo  al  cazo.  Es- 
tando de  este  modo  se  bate  con  la  mayor  .fuerza  posible  hasta 
que  se  pone  blanco;  después  se  vacía  en  unos  cajoncitos,  y 
después  de  secos  para  quitarles  el  papel  se  humedecen  por 
encima,  oon  esto  también  se  consigue  que  no  se.  desposti- 
llen. 

1,884  Guayabate  ¡noyeliano.  — Se  mondan  las  guayabas  y 
ee  ponen  al  fuego  hasta.que  suelten  el  hervor;  se  le  sacan 
las  tripas  y  se  remuele  bien;  las  tripas  se  pasan  por  un  ce- 
dazo 6  ayate  y  se  pica  tod»  menudo.  Se  hace  almíbar  de 
punto  de  bola  con  libra  y  cuarta  de  azúcar  para  cada  libra 
de  guayaba,  y  asi  que  está  se  le  echa  la  pasta  con  medio 
cuartillo  de  jalea  de  te  jocote  á  cada  libra  de  pasta.  Se  le  da 
punto  de  mojar  una  pala  y  meterla;  cuando  «alga  limpia  se 


190 

bate  mucho  hasta  qoe  te  enfrie  y  entonce*  so  le  echa  tro» 
clara  de  huevo  batid»  y  csocrrida  per»  cada  cinco  libree  de 
guayaba. 

1,886.  Yemate.—  Bien  clarificado  él  almíbar  y  con  un 
punto  de  melcocha,  se  le  echan  unas  yemas  de  huevo  bien 
batidas,  se  vuelve  á  batir  hasta  que  empanice,  se  le  agrega 
un  poquito  de  vino  y  ya  empanizado  se  hacen  bolitas  y  se 
revuelcan  ¿ti  azúcar  y  canela  molida. 

1.886.  YemaU. — 8é  pone  un»  libra  de  azdcer  á  que  se 
haga  almíbar  de  punto  de  bola,  y  y*:o¿ue  está  así  se  mésela 
media  libra  de  almendra  no  roay  remolida,  se  deja  que  to- 
me punto  de  cajeta  y  se  saca  de  la  lumbre  para  que  se  en- 
frie; se  le  agregan  veinte' peinas  de  huevo,  le  vuelve  á  la 
lumbre  para  que  cueza  él  hr.evo,  y  después  se  le  echa*  una 
cucharada  de  miel  virgen. 

1. 887.  Yema*  en  dulce.  — liáUnae  mucho  las  yemas,  y  des- 
pués échese  asacar  molida  ea  1»  proporción  de  obra  por  ye- 
ma, un  poco  dé  raspadura  de  hmon  ó  esencia  del  mismo,  y 
cuando  éste*  bien  mezcíacló  sé  van  haciendo  montoncitos  de 
este  batido  dé  la  figura  de  yema  que  se  pone '  en  una  hoja 
de  lata;  ésta  debeii  tener  asacar  extendida  para  que  no  se 
peguen. 

1.888.  Yema*  acaram\táda*.  — Se  hace  como  en  las  antece- 
dentes,  cuando  este*n  secas  se  les  baña  con  almíbar  tras- 
parente. 

1 .889.  Jaletina.  —Se  ponen  á  cocer  en  suficiente  agua  tres 
patas  de  ternera  bien  limpia*,  y  se  dejan  hasta  que  se  des- 
huesen. Ya  que  están  se  va  quitando  al  caldo  la  grasa  pa- 
sándolo por  un  cedazo.  Be  i  nden  ocho  cuartillos  y  se  vuel- 
ven á  colar  por  un  lienzo  nuevo  tantas  veces  cuantas  sea 


197 

necesario  para  quitarles  toda  grasa.  Se  mondan  tres  naran- 
jas dulces,  se  hacen  pedazos  las  cascaras  y  se  ponen  en  un 
cazo  con  el  zumo  de  Jas  mismas  naranjas,  una  libra  y  cuar- 
ta de  azúcar  muy  blanca,  cuatro  huevos  soló  quebrados, 
una  onza  de  canela,  medio  cuartillo  de  licor  de  naranja  y 
otro  medio  de  aguardiente  catalán  todo  mezclado,  y  se  po- 
ne á  la  lumbre  hasta  que  hierve  con  fuerza.  Después  se  va- 
cía en  una  manga  de  franela  para  que  destilé. 

1,800.  Jaletina  de  virio.— Se  ponen  á  cocer  tres  patas  de 
ternera  hasta  que  se  deshacen  enteras}  secuela  el  caldo;  se 
miden  ocho  cuartillos  y  se  les  quita  la  grasa  colándole  por 
una  servilleta  húmeda  y  el  caído  caliente.  Se  pone  una  li- 
bra y  nueve  onzas  de  azúcar,  dos  naranjas  dulces  con  cas- 
cara hechas  pedazos  y  una  pelada,  una  poca  de  canela  en 
rajas,  medio  cuartillo  de  aguardiente,  medio  de  vino  mos- 
catel, cuatro  huevos  con  cascara.  Se  pone  el  cazó  en  fuego 
activo  sin  flama,  porqué  se  prende  el  aguardiente;  cuándo 
suelta  el  hervor  se  le  echa  el  caldo  á  que  hierva  pronto  6 
hirviendo  se  echa  én  él  filtro,  teniendo  cuidado'  dé  echar- 
lo que  salga,  rebozado;  cuando  se  enfria  se  pone  en  el  cazo 
un  poco  de  todo  lo  que  dejó  arriba,  teniendo  él  mismo  cui- 
dado, se  calienta  y  vuelve  al  filtro;  para  sacarlo  del  molde 
se  mete  esto  en  agua  caliente  un  momento  y  se  voltea  -en 
un  platón. 


CAJETAS. 

1,891.    Cajete  de  alfajor  serrano. — Libra  y  media  de  azú- 
car bien  clarificada  junto  con  un  cuartillo  de  miel  virgen  se 


196 

le  da  punto  de  bolita  que  ■nene  en  el  agua,  ae  le  eeha  un 
poco  de  olor  y  agua  de  asehar,  ae  le  echa  una  libra  de  ga* 
lleta  abizcochada»  ó  de  biioocbo  de  pan  blanoo  marta  jado, 
una  libra  de  núes  encarcelada,  fresca,  mondada  y  molida 
con  media  libra  de  almendra  mondada  y  tostada  eon  las  nuo- 
oes,  todo  revuelto;  se  le  eoha  media  libra  de  ajonjolí  testa» 
do,  media  onza  de  claro  y  media  de  sánela,  un  pedacito  de 
ajengibre  y  de  núes  moscada,  molida  en  polvo,  se  pone  a  la 
lumbre,  se  revuelto,  oucce  hasta  estar  en  buen  punto,  se 
aparta,  se  revuelven  pedaeitos  de  la  otra  núes  y  almendra 
tostada,  pasas,  pifiones,  guindas,  uvas,  capulines,  cubiertos 
6  conservados,  rajites  de  acitrón,  higo  cubierto  y  rebana* 
das  de  plátano  pasado. 

1,892»  Ota»  efe  torren  ottedctteta-^Dos  libras  de  azúcar 
fina,  medio  cuartillo,  de  miel  virgen  se  hace  almíbar,  se  ola» 
rifioa.oqn  huero  y  limón,  se  cuela  por  un  lienst),  se  cuece  y 
da  punto  de  caramelo  6  de  panochita,  el  caso  es  que  tomé 
punto  muy  subido,  se  aparta  de  la  lumbre,  se  le  echan  uñas 
gotas,  de ; limón;  ya  se  tiene,  el  huevo  bien  batido  lo  masque 
se  pueda,  catorce  claras,  y  éste  se  echa  menos  de  la  mitad 
poco  á.  poco  ¡conforme  se  va  batiendo  se  bate  con  mas  fuer» 
tta  y  violencia  y  sin  parar;  luego  se  pone  á  la  lumbre  batién» 
dojo  sin  cesar,  hasta  que  cues*;  se  prueba  y  si  ye  coció  se 
baja,  se  le  echa  otra  parte  de  huevo,  se  bate,  se  pone  áoo» 
cer  del  mismo  modo,  se  baja  y  se  le  echa  el  último  huevó 
sin  el  aceite  de  su  asiento;  se  bate,  se  cuece  como  la  prime» 
ra  y  segunda  vez  porque^ehcaso:>es'que  se  bata  mucho  y  se 
cueza  el  huevo,  y  el  punto  cuando  suena  á  hueco  como  la 
masa,  de  tamales  y  se  ve  limpio  el  fondo  del.  caco  como  el 
punto  para  cajeta,  se  le  revuelve  ajonjolí  tostado,  pasas»  pi* 


m 

0an08  como  ge  dijo  en  la  de  alfajor  ó  lo  que  le*  pare- 
ciese* 

1,893*  Cajeta  de  camote*— -Tres  libras  de  asacar  ti  ti*  fe« 
filiada,  dos  libras  de  camote  blanco  molido  7  cernido,  se 
revuelve  7  ouece,  se  le  da  punto  que  despegue  del  caso;  se 
Je  echa  agua  de  azahar,  se  enfria  7  llenan  los  cascos  i  se  ha' 
<?en  camotitos  7  se  revuelcan  en  azúcar  tamizada,  se  orea 
y  secan  al  sol  para  que  tomen  tez, 

1,894*  Cajeta  de  camote  y  calabacita  de  CcwtiZZa,— Cuatro 
libras  7  doce  onzas  de  azúcar  blanca  clarificada  en  punto  de 
¿rffeñique,  una  libra  de  camote  molido  7  deshebratado,  dos 
libras  de  calabacita  de  Gasiilla,  diez  7  ocho  yemas,  cuatro 
cjnzas  de  almendra  molida,  un  cuartillo  de  leche,  cocido  to- 
do 7  todo  revuelto  en  almíbar  clarificada;  7a  fria  se  vuelve 
á  la  lumbre  hasta  que  tome  punto  de  cajeta, 

1.895.  Cajeta  de  camote  y  pina, — Molido' 7  pasado  en  co* 
ladera;  á  libra  de  pina  libra  de  azúcar  clarificada  7  de  medio 
punto,  se  revuelve  la  pina  conservada  á  parte,  se  une  ál  ca- 
mote hasta  que  tome  punto  bien  alto  para  que  no  llore  por 
abajo  de  los  cascos  en  que  se  vacía. 

1.896.  Cajeta  de  camote  y  pitaya.~-~>A  una  libra  7  cuatro 
onza»  de  azúcar  seis  pitavas  7  una  libra  de  camote  en  la  f or* 
ma  dicha;  preparado  se  revuelve  en  almíbar  de  medio  pun- 
ió, la  pitava  se  cuela,  si  quieren,  porque  los  granillos  no 
desdicen,  se  une  este  zumo  al  camote  7  par»  que  no  quede 
verdosa  se  le  echa  un  pedazo  de  panela,  chico. 

1,897*  Cajeta  de  cidra.-^h  libra  de  azúcar  libra  7  media 
de  cidra,  se  parte  rallada  7  toda  desflemada,  se  cuece  7  se 
desamarga;  ae  conserva  á  parte,  se  le  revuelve  camote  moli- 
do y-colado  7  se  pone  á  la  lumbre  hasta  que  esté*  en  su  punto, 


300 

1,898.'  Cajeta  de  membrillo. — Han  de  ser  blancos  sin  prie- 
titos,  ni  oteara  amarilla,  te  cuecen,  se  mondan  y  se  echan 
en  agua  fría  después  do  descorazonados;  se  desfleman  doa  6 
tros  días,  do  modo  que  no  pierdan  todo  oí  agrio,  se  le  mn* 
d¿n  aguas  para  quo  no  so  pongan  colorados,  so  muelen  y  á 
cada  libra  dé  fruta  libra  de  almíbar;  se  revuelve,  se  pone 
al  fuego  y  da  su  punto  alto  para  que  tenga,  buen  corte. 

1.899.  Cajeta  de  leche  y  mamey;— Oinoo  cuartillos  de  le- 
che endulzada  y  cocida  con  cinco  libras  de  asdoar  fina  y  una 
raja  de  canela,  se  cuela,  se  le  revuelve  una  libra  de  mamey 
pasado  por  metate  y  coladera;  hierve  meneándolo  hasta  es- 
tar en  su  punto;  se  le  echa  azahar  y  olor. 

1.900.  Cayia  de  Chirimoya. — Tres  libras  de  asacar  fina 
bien  clarificada,  veintiocho  yemas  cocidas  y  cernidas,  seis 
onses  de  almendra  molida;  todo  se  une  y  se  revuelven  otras 
dios  yemas  crudas,  se  cuece  y  da  punto  que  cuaje  en  agua; 
se  le  echa  su  asahar  y  olor. 

1.901.  Cajeta  de  calabaza  talamayota  y  (eeae.— A  tres  li- 
bras de  calábase,  seis  cuartillos  de  leche,  dos  libras  y  media 
de  azocar,  blanca,  se  clarifica  la  azocar  y  ya  que  está  dé  pun- 
to alto  se  le  echa  la  calabaza  cocida  y  molida,  y  que  dé*  unos 
hervores  con  la  azúcar;  luego  se  le  echa  la  mitad  dé  la  leche 
y  así  que  haya  hervido  se  le  echa  la  otra  mitad  hasta  que 
esté*  de  punto,  y  agua  de  azahar. 

1.902.  De  arequipa* — Ocho  y  medio  cuartillos  de  leche» 
media  cuarta  de  azúcar  fina  colada  y  cocida  con  una  rajita 
de  canela  que  quede  bien  endulzada,  se  le  echa  suficiente 
almendra  martajada  cuando  quiera  estar  de  medio  punto;  y 
á  poco  rato  que  cueza  la  almendra,  se  le  echa  un  camote  6 
mamey  deshebrado  y  pasado  por  el  metate  y  por  coladera, 


201. 

ó  pitayn,  ó*  guayaba,  ó  calabacita  de  Casulla,  sin  echarle  agua 
pata  n*da$  se  pone  en  la  lumbre  meneándola,  se  le  da  ptm* 
to  que  cuajé  en  agua  y  poco  antee  de  apartado  se  le  echa 
agua  de  azahar  y  de  olor. 

1.903.  Otra  de  arequipa.— A  oinco  cuartillos  ele  leche  dos 
y  media  libras  de  azúcar  una  y  cuatro  onzas  de  almidón  * 
una  onza  de  almendra  sin  remoler;  luego  que  cuece  la  leche 
endulzada  y  con  su  raja  de  canela,  se  echa  el  almidón,  co- 
ciéndose y  ya  espeso  se  echa  la  almendra  á  que  cueBA  has- 
ta que  quiera  tomar  punto;  se  echa  una  pifia  Hmpia  y  remo- 
lida meneándola  continuamente;  se  le  da  su  punto  y  poco 
antes  se  le  echa  la  agua  de  azahar,  olor  y  un  poco  de  pane* 
cilio;  en  cuanto  tina  se  aparta'  de  la  lumbre,  se  en  pan  izan, 
se  llenan  los  cascos,  se  orean  y  sacan  al  sol* 

1.904.  Cajeta  de  ¡¿che  y  yma*,— *Seis  cuartillos  de  leche 
en  que  se  deslían  cuatro  libras  de  azúcar  fina,  se  cuece  con 
su  raja  de  canela  y  se  cuela  medía  libra  de  almendra  pasa- 
da por  metate  con  un  poco  de  leche;  hierve  hasta  que  cae* 
ce  y  espesa,  se  aparta  y  enfria,  se  le  incorporan  veintidós 
yemas  y  dos  ó  tres  natillas  y  se  vuelve  á  cocer  hasta  tomar 
punto  y  poco  antes  se  le  echa  agua  de  azahar  y  olor. 

•  1,905.  Cajetas  de  natas  de  leche,  r*- A  tres  libras  de  azúcar 
clarificada  de  medio  punto  se  le  echa  una  libra  de  camote 
blanco  molido,  media  libra  de  almendra  bien  fina  y  medio 
coco.  Asi  que  todo  esto  ha  tomado  punto  de  cajeta  se  le  echa 
un  real  de  natas  de  leche,  y  estando  á  punto  de  despegarse 
del  cazo  se  apea  del  fuego  y  se  llenan  -los  platos  6  cajetas. 
1,906,  Cajeta  de  melón. — A  cuatro  melones  regulares  mo- 
lidos se  les  echan  tres  libras  de  azúcar  clarificada  y  tibia, 
seis  yemas  de  huevo  y  media  libra  de  almendras  no  muy 


.202 

molidaa;.se  pone*  todo  en  Ja  lumbre  y  ■•  menee  hasta  que 
tome  punto  de  cajeta. 

1,907.  Cajeta  de  mamey. — Se  pele  camote,  pifie  y  mamey 
y  ee  muele  cada  fruta  por  separado,  procurando  ponerlas  en 
igual  proporción.  A  eada  libra  de  eeta  pasta  se  le  echan  dos 
libras  de  asacar  clarificada  y  dos  ousea  de  almendra  molida; 
ya  que  van  tomando  punto  se  menea  hasta  que  despegue 
del  caso. 

1906.  Cajeta  de  mermelada* -^-Cocido*  los  membrillos  blan- 
cos oon  su  cascara  en  agua  y  una  de  paja,  se  mondan  y  des- 
oorasonan,  se  van  echando  en  agua  fría  con  una  poca  de  sal 
por  media  hora,  se  enjugan  f  dejan  con  agua;  cada  hora 
pooo  mas  6  menos  se  les  muda  agua  hasta  cuatro  ocasiones, 
después  se  rallan  6  pasan  por  metate,  luego  por  ayate  ó  co- 
ladera; á  cada  libra  de  fruta  dos  de  asacar  blanca  maoisa, 
se  clarifica  bien  y  el  membrillo  se  pone  en  un  caso  á  la  lum- 
bre á  que  seque,  porque  cuanto  mas  seco  mejor  está,  lo  que 
se  hará  á  fuego  manso,  y  en  cuanto  se  consuma  la  hume- 
dad; á  la  almíbar  se  le  da  punto  que  cuaje  en  el  agua,  se 
aparta  y  á  pooo  rato  se  le  revuelve  la  pasta,  y  se  bate  hasta 
que  emblanquezca  y  enfríe,  se  vuelve  á  la  lumbre  mansa, 
da  un  hervor  batiéndolo,  se  quita  y  se  sigue  batiendo  hasta 
enfriarlo,  se  echa  en  vidrios  ó*  en  casóos  bien  tapados  y  á 
fuerza  de  sol  se  concluye  hasta  que  queden  buenas. 

1,909  Nota. — En  la  última  agua  se  quedará  el  membri- 
llo hasta  el  día  siguiente,  y  al  tiempo  de  echarlo  en  el  almí- 
bar se  revuelve  una  tasa  de  la  baba  que  largan  loa  ooraso- 
nes,  echándolos  en  una  poca  de  agua  luego  que  se  le  quitan 
y  quedándose  en  ella  hasta  el  tiempo  de  pasarlos  por  una 
piehancha. 


203 

1.910.  Otra  jalea  de  membrillo. — Se  pone  agua  á  her- 
vir y  se  le  echan  los  membrillos  sin  cascara  ni  corazón  par- 
tidos por  en  medio;  después  de  cocidos  se  apartarán  del  fue- 
go y  se  sacarán  del  cazo  con  una  cuchara  de  palo,  el  punto 
se  conoce  tocándolos  con  los  dedos,  si  están  ya  babosos  se 
echarán  en  un  canasto  para  que  escurra  el  agua,  la  que  se 
colará  por  un  cedazo  y  se  medirán  de  ella*  catorce  ouartülos 
de  esta  jalea,  si  está  muy  aguada  se  le  echará  una  arroba 
de  azúcar,  se  clarifica  todo  junto  y  se  cuela  para  ponerla  en 
la  lumbre  así  que  empieza  á  saltar  como  marquesote. 

1.911.  Cajeta  de  huevo. — Tres  libras  de  azúcar  fina  en  le- 
che ó  en  agua  bien  clarificada,  veintiocho  yemas  cocidas  y 
pasadas  por  cedazo,  seis  onzas  de  almendras  molidas  y  otras 
diez  yemas  crudas  se  unen;  revuelto  todo  se  cuece  y  da  pun- 
to que  cuaje  en  agua,  se  le  echa  su  olor. 

1.912.  Otra  deregueton. — Se  clarifica  bien  azúcar  fina;  se 
le  da  medio  punto,  se  va  echando  poco  á  poco  el  requesón 
mientras  otro  bate  como  se  hace  con  el  huevo  para  turrón 
hasta  que  se  desbaraté  bien;  se  quita  de  la  lumbre  y  se  ba- 
te mucho,  después  se  vuelve  al  fuego,  se  le  echa  agua  de 
azahar,  se  le  da  punto  de  cajeta  y  se  llenan  los  cascos. 

1.913.  Cajeta  de  pera. — Que  sean  grandes,  ni  verdes  ni 
pasadas,  se  ouecen  á  fuego  de  lefia,  y  se  echan  hirvien- 
do la  agua  bastante  á  cubrirlas  todas,  y  así  que  están  tier- 
nas se  mondan  y.  hacen  rebanadas  delgadas  y  sin  pepitas; 
se  van  echando  en  un  lebrillo,  se  pesan  dos  libras  de  pe- 
ra y  una  de' azúcar  blanca  molida,  y  para  que  salga  blan- 
ca no  se  ha  de  hacer  mucha  cantidad;  se  pone  al  fuego  con 
buena  lumbre  de  lefia,  se  está  meneando  con  patita,  y  cuan- 
do en  el  fondo  del  cazo  aparezca  una  telita  blanca  y  como 


que  fríe  al  rededor,  estará  cocido,  se  Aparta  y  se  le  echa  olor 
de  almistle. 

1.914.  Cajeta  de  e*pe}iudos. — Se  mondan  loe  membrillos 
sin  dejarles  prieto  algalio  y  se  hacen  rebanaditas  sin  tocar» 
les  el  corazón,  se  echarán  en  ajen*  de  sal  medio  dia;  y  luego 
se  tacan  y  se  echan  en  o»  cato  de  agua  hirviendo,  y  ya  que 
se  hayan  cocido  entonces  se  echan  en  agua  fría  y  se  tienen 
en  ella  hasta  el  dia  siguiente,  después  de  bien  escurridos  se 
pesan;  á  ana  libra  de  membrillo,  se  echan  dos  y  media  de  al* 
tnibar.  clarificada,  teniendo  esta  el  panto  de  alfeftiqne,  este 
es,  el  que  se  quiebra  en  la  Agua!  esto  se  pone  jonto  á  hervir 
y  se  echa  un  poco  en  nn  plato,  si  hace  telita  se  quita  el 
cazo  de  la  lumbre;  se  echarán  á  tres  libras  de  membrillo  cin- 
co cuartillos  de  jalea  de  durazno  y  uno  dé  la  de  manzana, 
y  sigue  on  el  fuego  hasta  que  tome  el  punto  de  hacer  teli» 
tas,  de  este  modo  se  echa  en  el  vidrio  6  casco. 

1.915.  (Hra  de  espejuelo*  de  membrillo.— Se.  mondan  los 
membrilos  y  se  van  cortando  tiritas  muy  delgadas  para  irlas 
echando  en  agua  hirviendo;  ya  que  se  hayan  cocido- se  echa» 
rán  en  agua  fría  oon  jal.  la  que  se  le  mudará  tres  veces,  se 
tendrá  almíbar  clarificada  y  se  echarán  los  membrillos  á  qué 
tomen  punto;  las  porciones  serán  á  una  libra  de  membrillo» 
otra  de  azúcar  y  sal;  es  un  dulce  esqulsito. 

1.916.  Método  pata  hace*  él.  oimtoar  clarificado  y  darU 
sus  punto*.. — Para  que  el  almíbar  est¿  á  medio  punió  acechan 
dos  partes  de  azdoar  y  tres  de  agua;  se  pone  al  fuego,  y  cuan- 
do principia  á  hervir,  se  limpia  y  clarifica  con  claras  de  hue- 
vo desleída*  en  agua;  á  los  pocos  momentos  se  verá  subir  á 
la  superficie  una  «apuna  sacia;  se  reúne  á. un  lado,  y  se  qui- 
ta poco  á  poco  con  una  espumadera  de  madera*  hasta  que  se 


205 

vea  no  queda  nada;  cuélese  entonces  por  un  paño  de  frane- 
la, y  está  hecho  el  almíbar  á  medio  punto.  También  puede 
clarificarse  el  almíbar  con  leche  de  vaca,  si  no  hay  huevos. 
Se  ha  de  procurar  mucho  que  la  vasija  en  que  se  haga  el  al- 
uStbar  sea  bien  limpia  y  sin  grasa  alguna,  y  si  f  uore  cazuela 
ha  de  ser 'nueva. 

1. 917.  Diferentes  pantos  de  almíbar. — Pónese  almíbar  que 
te'  ha  colado  de  medio  punto  al  fuego,  y  tomará  todo  su  pim- 
ío cuando  mojando  y  retirando  velozmente  la  espumadera, 
se  vea  forma  un  hilo  que  se  quiebra.  •  Si  se  deja  un  poco 
mas  á  la  lumbre  toma  un  punto  mayor,  que  se  conoce  en 
que  forma  un  hilo  sin  romperse.  Si  después  de  este  punto 
se  le  deja  mas  al  fuego,  tomará  el  punto  de  perla,  el  cual  se 
conoce  en  que  el  hilo  que  se  forma  se  quiebra  y  es  vidrioso. 
8i  continúa  el  almíbar  puesto  al  fuego  toma  el  punto  de  ca- 
ramelo, el  cual  se  conoce  en  que  el  almíbar,  cuando  hierve, 
forma  unas  burbújitas  y  despide  olor. 

1.918.  Almíbar  de  limón, — Tómense  doce  onzas  de  zumo 
de  limón  y  veinticuatro  de  azúcar;  después  se  pone  á  repo- 
sar el  limón  en  una  vasija  por  veinticuatro  horas.  Se  pasa 
y  cuece  el  azúcar,  se  añade  el  jugo  y  después  de  menearlo  y 
haber  dado  un  hervor  se  aparta  y  se  envasija. 

1 .919.  A  Imíbar  de  tres  frutas.  — Se  toman  fresones  y  guln  - 
das,  ocho  onzas  de  cada  una,  mondándolas  bien;  estas  fru- 
tas se  machacan  y  se  exprime  su  zumo  por  medio  de  una  ser* 
villeta  6  de  un  cedazo:  se  reduce  todo  aun  fuego  templado, 
se  clarifica  y  se  hacen  oocer  en  azúcar,  dejándolo  hervir  por 
algunos  minutos,  retirándolo  y  meneándolo  hasta  que  se  en- 
durezca. Se  echa  esta  conserva  en  cajetines  de  papel,  y  re- 

LA.  «OOZCTUU.  POBLANA.— TOM.   II — 14. 


906 

gularmente  m  necesitan  tres  libia*  de  asacar  par*  ana  libm 
de  samo  de  fratM. 

1.920.  Almíbar  de  cafL  — Se  tuertan  y  muelen  oeho  onzas 
de  café';  te  ponen  en  infusión  en  dos  enaiülloe  de  agua  y  te 
destilan  por  el  filtro;  se  añaden  cuatro  libras  de  asacar,  y 
se  cuece  hasta  que  se  baile  en  punta  Este  almíbar  puede 
usarse  pon  la  leche,  y  es  preferible  al  cocimiento. 

1.921.  Almíbar  de  cañeta. — Se  ponen  en  infusión  en  seis 
libras  de  agua  ocho  onsas  de  canela  fina,  y  se  tiene  así  vein- 
ticuatro horas,  procediendo  después  i  la  destilación  por  alam- 
bique, de  la  que  saldrá  la  mitad  del  agua  próximamente:  se' 
ponen  ocho  onzas  de  esta  agua  en  un  Taso  grande,  que  se 
tapa  con  un  pergamino  agujerado  con  un  alfiler;  éste  Taso 
se  introduce  en  agua  caliente  de  setenta  á  setenta  y  cinco 
grados;  cuando  está  todo  mezclado  se  aparta  y  se.  deja  en* 
friar,  se  pasa  por  un  tamiz  y  se  embotella. 

1.922.  Almíbar  de  horchata. — Se  tomará  una  libra  de  al- 
mendras dulces,  cuatro  onzas  de  amargas,  dos  libras  de  azn% 
car,  una  azumbre  de  agua,  dos  onzas  de  agua  de  flor  de  na* 
ranja  y  la  corteza  de  un  limón.  Las  almendras  se  dejan  en 
agua  fría  el  tiempo  conveniente  para  qne  el  pellejo  se  sepa- 
ré con  facilidad,  y  no  deben  echarse,  eomo  se  acostumbra, 
en  agua  caliente:  se  ma ja»  las  almendras  en  un  mortero, 
añadiendo  raeduras  de  las  cascaras  ó>  un  limón:  se  deslíe 
todo  en  una  mitad  de  agua,  se  prensa,  se  cuela  y  se  cuece 
hasta  que  tome  suficiente  consistencia.  Se  embotella  y  se» 
cuida  de  agitarlo  cada  dos  6  tres  dias*. 

1.923.  Almíbar  de  mafamfoo.  Se  cuecen  seis  onzas  de 
raíz  de  malvavisco  en  cuatro  libras  de  agua  paca  extraer  el 
mncúago;  se  cuela  y  «e  mezclan  seis  libras  de  asacar,  que 


207 

se  hace  cocer  hasta  la  consistencia  de  jarabe.  Si  no  hay  que 
pautarlo  muy  pronto,  sera"  mejor  dejarlo  eocer  haHta  el  pon- 
lo  de  caramelo,  pues  de  lo  contrario  se  fermentaría.  Cuan- 
do hay  que  gastarlo  se  deslíe  en  agua  de  flor  de  naranja. 

1924.  .álmftar  ds  arañadas. — Se  toman  granadas  madu- 
ras, se  sacan  los  granos  y  te  ponen  después  de  machacados 
en  una  cantidad  Droporoionada  de  agua  de  rio  para  cocerlos 
algunos  minutos;  se  pasan  por  tamiz,  se  dejan  reposar*  y'sa 
extrae  el  líquido  por  decantación;  en  diez  y  siete  onzas  de 
líquido  de  granadas/**  echan  dos  libras  de  azúcar  y  se  cue- 
ce, espumándolo. 

1,926.  Clarificación  del  azúcar. — Oon  nn  poquito  de  agua 
ae  bate  muy  bien  una  yema  de  huevo,  añadiendo  poco  &  po- 
co un  vaso  regular  de  agua  fria;  se  ponen  en  una  vasija  seis 
d  siete  libras  de  azúcar  fina,  que  se  deslíe  oon  la  mitad  del 
agu*  preparada  con  la  yema  de  huevo,  debiendo  qnedar 
muy  espesa,  se  pone  la  vasija  al  fuego;  antes  de  espnmar- 
la.se  deja  subir  el  azúcar  por  dos  veces;  después  se  echa  po- 
co á  poco  la  otra  mitad  del  agua  preparada,  estando  en 
punto  cuando  la  espuma  salga  enteramente  blanca;  se  apar- 
ta del  fuego  y  se  echar  en  el  azúcar  un,  vaso  de  agua  fria.  . 

1.926.  Compota  de  mamona. — Se  cortan  en  dos  6  cuatro 
pedazos,  según  bu  grueso,  se  les  quita  el  corazón  y  se  ponen 
ü  cocer,  en  un  poco  de  agua  y  azúcar  suficiente;  para  servir- 
las, no  se  aguardará  á  que  se  haga  mermelada*  Se  riegan 
con  su  mismo  caldo,  después  de  reducida  Solo  se  pelan 
las  manzanas  de  la  reina;  las  otras,  de  cualquiera  especie 
que  sean,  se  les  pica  ligeramente  el  pellejo. 

1.927.  Compota  dé  manzana día  portuguesa Peladas  y 

quitadas  las  pepitas  de  las  manzanas,  se  ponen  en  una  tor- 


20b 

ten  sobre  om  cape  de  asnear  en  polvo  póngase  edema» 
asnear  en  el  oorason  de  cede  ene  de  eUss,  y  de  eete  modo 
■e  eolecen  en  el  horno  ó  en  el  horno  de  campan»,  deepnee 
ae  expolvorean  con  asacar  7  te  sirven  calientes. 

192&  Competa  Manca  de  pera*. — Póngante  las  peras  en 
agua  hirviendo,  y  antes  de  que  estén  cocidas  pásense  á  la 
agua  fría;  se  pelan  en  seguida  y  se  las  raspa  el  peson  y  ae 
vuelven  al  agua  fría,  bien  sea  enteras  ó  en  pedasns,  se  po- 
nen á  cocer  en  almíbar  con  una  raja  de  limo©,  y^déjense 
acabar  de  cocer;  se  sirven  calientes  6  frías. 

1929.  Compota  roja  de  pera»,  —Quítenselas  los  ojos,  rae* 
pense  los  pezones,  se  pelan  si  se  quiere;  pónganse  al  fuego 
en  vasija  de  barro  con  agua,  asacar,  un  poco  de  canela  y 
un  pedadto  de  estaña  Esta  compota  se  sirve  generalmente 
caliente. 

1930.  Compota  de  capulines. — Se  pone»  en  el  caso  con 
un  poco  de  agua  y  asnear  los  capulines  después  de  cortados 
los  pezones;  cúbranse  y  se  les  deja  dar  unce  horrores;  se 
colocan  en  el  platón,  se  riegan  con  so  caldo  y  se  dejan  en* 
Mar. 

1.931.  Compota  de  fremu. — Después  de  lavar  bien  y  escur- 
rir las  fresas,  se  ponen  en  almíbar  hirviendo,  pero,  en  la- 
gar de  dejarme  cocer,  se  retiran  al  instante  del  fuego  peni 
dejarlas  reposar:  poco  después  se  las  hace  temar  un  hervor 
y  se  sacan  en  seguida. 

1.932.  Compota  de  ehahaeamoe. — Córtense  en  dos  pedasos, 
quítense  los  huesos  y  arréglense  en  un  platón  de  barro,  cu- 
yo suelo  se  habrá  expolvoreado  de  asnear  raspada;  riégúen- 
se ligeramente  con  agua  y  pónganse  sobre  un  fuego  lento 
á  que  cuesan  hasta  la  casi  total  reducción  del  aksíbar;** 


209 

vuelven  á  expolvorear  oon  azúcar,  cubriéndolos  con  una  ta- 
padera por  encima,  y  sírvase  fría. 

1,933.  Compota  dé  durazno*. — Se  cortan  en  dos  pedazos, 
se  les  quitan  los  huesos,  se  remojan  para  pelarlos;  se  hace 
el  almíbar  como  para  las  grosellas,  se  pone  en  el  los  meloco- 
tones, se  secan  estos,  se  deja  espesar  el  almíbar  y  se  riegan 
oon  ella  en  la  compotera;  sírvanse  fríos. 


conservas.  , 

1.934.  Conservo,  de  fresas  y  capulines. — Tómense  fresas  es- 
cogidas y  capulines,  media  libra  de  cada  cosa;  se  quitan  los 
huesos  y  cabos  y  toda  la  fruta  se  despachurra  bien;  se  ex- 
prime su  sumo  por  medio  de  una  servilleta  6  de  un  cedazo 
y  se  reduoe  todo  á  un  fuego  templado>  se  clarifica  y  se  hace 
cocer  en  azúcar,  dejándolo  hervir  por  algunos  minutos,  re- 
tirándolo y  meneándolo  basta  que  endurezcan.  Esta  con- 
serva se  echa  én  cajetillas  de  papel  6  tarrillos  preparados. 
Para  una  libra  de  sumo  se  necesitan  tres  de  asacar. 

1.935.  Conserva  de  chabacanos. — Se  mondan  y  se*  echan 
en  agua  fría,  se  pone  á  hervir  en  una  cazuela;  cuando  está 
hirviendo  se  van  echando  los  chaváosnos  á  que  se  cuezan; 
cuando  suben  se  sacan  y  se  echan  en  agua  fría  con  sal;  se 
dejan  en  agua  como  dos  horas  y  se  les  muda  dos  6  tres 
veoes  hasta  que  ya  no  tengan  sal;  por  cada  libra  de  fruta  se 
echa  una  libra  de  azúcar;  se  clarifica,  que  no  esté*  muy  es- 
pesa ni  aguada;  se  deja  enfriar  y  se  le  echan  los  chabacanos, 
se  ponen  á  hervir  á  fuego  manso  hasta  que  se  hace  oonserva. 

1.936.  Conserva  de  limón.. — Se  esoojen  los  limones  mas 


210 

verdes  y  que  sean  traeos  7  poroso*;  se  echan  en  agua  y 
luego  se  rallan  en  ana  piedra  pómez,  procurando  quitarles 
no  mas  Jo  de  encima!  pero  deben  quedar  con  su  color  Tercie, 
se  abren  en  erus  para  que  salga  el  jugo,  y  se  ponen  al  hor- 
no un  corto  rato:  al  segundo  hervor  se  les  pueden  sanar  las 
tripas  para  que  mas  pronto  se  desaiñargúen,  haciendo  esto 
con  cuidado  para  no  maltratarlos,  advirtiendo1  que  tos  her- 
vores han  de  ser  muchos,  pero  cortos,  para  que  se  les  quite 
completamente  el  amargo,  y  que  cada  ves  que  se  haga  esto 
se  deben  echar  en  agua  tria  para  pasmarlos.  En  almíbar 
solo  se  les  da  uno  6  dos  hervores,  pues  es  suficiente. 

1*937.  Conserva  de  Umtm  reeX— 'Limpiados  se  cuecen  con 
sal  no  macha,  se  sacan  i  la  agua  iría  y  ésta  se  les  muda  dia- 
riamente, hasta  que  enteramente  pierden  su  amargo,  se  echan 
en  el  almíbar,  hierven  y  se  quitan,  y  esto  mismo  se  hace  poi 
tres  dias  y  en  el  último  se  les  echa  agua  de  azahar,  y  se  let 
da  punto  si  ya  están  bien  calados,  y  si  no  lo  están  y  el  alml- 
bar>on  no  tiene  punto  se  sacan  para  dárselo  y  luego  se  vol- 

1.938.  Conetrv  de  Umon  raüado.  —Se  rallan  en  cuanto  m 
les  quita  la  cortesa  amarilla  sin  llevarse  nada  de  la  blanca 
interior >  se  pasan  con  un  punzón,  se  cuecen  en. age*  sola 
se  pasan  á  otra  agua,  caliente,-  se  dejan  en  ella,  al  otro  dia 
se  mudan  á  otra  caliente  y  esto  se  hace  4- tarde  y  á  mañana 
seis  ú  ocho  dias  hssts  que  desflemen  bien  y  nada  amarguen v 
se  echan  á  fuego  manso  en  almíbar  fina,  dan  un  hervor  a! 
otro  dia,  al  teroerct  jotro,  con'  agua  de  azahar  acaban  de  ca* 
.lar  y  toma  punte  de.  miel. 

1.939.  Conserva  de  limoneüloe. — Verdes  y  fréseos  se  leí 
da  una  cortada  por  un  lado;  se  echan  en  una  olla  con  aguí 


211 

dan  un  solo  hervor,  ae  quita  esa  agua,  se  exprimen  tan- 
tito  para  quo  salga  la  pepita,  se  enjuagan  y  en  otra  agua 
vuelven  á  la  lumbre  á  dar  otro  hervor,  ae  quitan  y  pasan  á 
otra  agua  fría,  entonces  se  destripan  con  cuidado  y  ya  lim- 
pios quedan  en  agua;  á  fuerza  de  mudarles  agua  en  la  lum- 
bre es  como  se  desamargan,  mantienen  y  aumentan  su  ver- 
dor; ya  desflemados  y  prevenida  ana  olla  de  almíbar  fina, 
se  echan,  se  tapa  y  ponen  á  dar  un  hervor;  luego  se  quitan 
sin  destapar,  ya  que-  han  hervido  bien  se  dejan  enfriar,  se 
sacan  6  escurre  la  miel  y  se  quedan  tapados,  se  le  da  punto 
al  almíbar  con  agua  de  acabar,  y  se'  les  vuelve  á  echar;  la 
precaución  de  taparlos  es  porque  con  el  aire  sé  acuerán  y  ba- 
jan de  color,  y  cuando  últimamente  se  echan  en  la  miel  ha 
de  estar  ya  fría;  si  se  hubieran  de  rellenar  de  alguna  pasta, 
la  de  coco  es  la  que  nías  les  está,  en  su  falta  la  de  piñón  ó 
almendras. 

1,940»  Conserva  de  lítaos. — Las  limas  han  de  estar  amari- 
llas,, se  mondan  bien  .sin  quitarles  el  pezón,  se  ponen  á  cooer 
con  tantita  sal,  y  así  que  están  se  sacan  y  se  echan  en  agua 
caliente  sin  sal  dos  djas,  y  dos  veces  se  ha  de  mudar  el  agua 
cadadia,  y  hasta  que  las  limas  están  jMas  no.se/lea .echa 
agua  fria;  á  seis  limas  una  libra  de  azucaraba de  estar  la  miel 
fría  y  las  limas  frías  cuando  se  juntaren,  y  se  ponen  á fuego 
manso.  La  miel  ha  de  tener  bastante  agua*  para  que  no  sea 
menester  echarle  mas  después,  no  se  les  saca. lo  de  adentro, 
se  les  parte  la  cascarilla  como  está  y  que  se  quede  como  es 
la  lima. 

1,941.  Conserva  de  grüinda.— Deshuesadas  con  un  fistol, 
a*  echan  en  agua  fria,  se  lavan  hasta  que  e*sta  apenas  sale 


212 

tenida,  se  echan  en  el  almíbar  fría  hacia  qae  se  oóneerven 
bien. 

1.942.  Oon—rsa  dé  melón.— Bntre  verde  y  maduro  ee  moa* 
da,  y  hacen  ocho  tajadas  de  cada  melón,  se  le  da  un  ligero 
cocimiento,  ee  pone  por  una  mañana  al  sol  mudándole  aguas 
de  cal,  se  eche  en  el  almíbar  fría  y  eon  hervor  violento  á 
que  cale  y  tome  punto,  se  deja  enfriar  y  se  le  echa  agua  de 
azahar. 

1.943.  Cbnesrra  dé  naranjo*  antees. — En  el  rallo  se  lee 
quita  lo  amarillo,  se  les  hace  una  ooronita,  se  hierren  mu- 
dando aguas  y  se  hace  lo  mismo  que  se  dijo  para  los  limones 
sin  las  precauciones  de  ojia  y  demás  que  solo  ellos  necesitan ; 
á  los  tres  días  después  del  último  hervor  ee  revuelcan  en  un 
lebrillo  y  se  ponen  al  sol,  mudándoles  agua  diariamente 
hasta  que  no  amarguen,  después  oon  ouoharita  de  estuche  ee 
extraen  las  pepitas,  solamente  se  echan  á  conservar;  oon  el 
mismo  modo  que  las  anteriores  se  concluye. 

1.944.  Otra  dé  naranjo*  dgrúu. — Raides  como  las  ante- 
riores, se  lee  hace  su  coronilla  y  rellenas  de  sal  se  pasan  de 
parte  á  parte  oon  un  punzón  dándoles  cuatro  piquetes,  se 
.desfleman  nueve  días  mudándoles  agua  diariamente  y  expri- 
miéndolas muy  suave  en  cada  ves,  se  cuecen  y  deeamargan 
á  fuerza  de  echarlas 'en  aguas  tibias,  y  ya  sin  amargar  en  la 
almíbar  acabada  de  clarificar  hierven  muy  poco  á  poco  en 
espacio  de  tres  días,  en  la  forma  que  se  ha  dicho  anterior- 
mente; en  el  último  ee  echa  la  agua  de  azahar  y  se  da  á  la 
miel  so  punto  de  espejo. 

1,946»  Oomena  dé  nuez* — Antes  de  coa  jar  por  fines  de 
mayo  se  mondan,  de  la  primera  cascarilla  6  tes  delgada  y 
se  punzan  por  tres  ó*  cuatro  partes  pasándolas  de  lado  á  la- 


213 

do  con  alguna  cosa  proporcionada,  verbi  gracia,  malacate, 
lesna  gorda  6  punzón;  te  echan  en  agua  nueve  días,  se  lee 
muda  diariamente,  al  cabo  se  echan  en  agua  hirviendo  dan- 
do dos  6  tres  horrores;  se  quitan  cuando  ya  estén  tiernas  y 
se  escurren;  se  clarifican  cuatro  cuartillos  de  almíbar  para 
cien  nueces  y  se  echa  en  ella  fría;  se  poden  á  hervir  en  po- 
ca lumbre  hasta  que  la  miel  cueza,  se  quitan  y  se  le  echa 
agua  de  azahar,  clavo,  canela.y  tres  granos  de  pimienta. 

*  1,946.  Conserva  de  ^ranaáttaa.— Frescas  y  verdiosas  s«  les 
quita  la  cascara  dura  sin.  romper  el  capullo  blanco  interior, 
dejándole  el  talltto  á  todas  de  un  tamaño  y  en  buena  pro- 
porción; por  la  coronilla  se  abren  lo  que  baste  á  vaciarlas  si 
se  han  de  rellenar  y  si  esto  se  hace  con  pasta  de  coco  que 
son  mas  gustosas  6  con  otra,  se  les  da  después  de  mondadas 
y  vacias,  ó*  sin  vaciar,  un  hervor  tenue,  se  echa  en  el  al  mí- 
bar,  y  concluye  oomo  todas  las  anteriores. 

1,947.  Conserva  de  calaboaa^melon. — Se  Jes  quita  su  pri- 
mera ciscara  demasiadamente  delgada,  se  hacen  ruedas  de 
un  dedo  de  ancho,  se  quita  la  pepita  á  punta  de  cuchillo,  se 
echan  no  en  agua  de  cal  .sino  limpia,  se  menea  con  la  mano 
y  se  revuelve  oomo  quien  haoe  jabonadura  para  que  suelten 
su  espuma  ¿hebilla,  sobre  la  cual  se  funda  el  almíbar  des- 
haciendo en  la  misma  agua  azúcar  blanca.. y  maciza  la  que 
se  clarifica  muy  bien,  con  clara  y  limón,  y. se  le  da  medio 
punto  y  se  echa  en  olla  y  luego  la  calabacita;  se  tapa  por  in- 
terés de  su  aroma,  se  cuida  de  que  se  deshaga  á  fuego  .man- 
so, si  caló  se  aparta;  ai  le  jaita  punto  á  la  miel  se  saca  y  ta- 
pa y  se  le  acaba  el  punto  echándole  agua  de  azahar,  mas 
por  el  gusto  que  por  el  olor,  se  deja  enfriar  el  almíbar;  se 


2U 

echa  U  frota  y  se  topa,  porque  ai  se  topa  caliento  se  agria  ó 
cuando  menos  se-  agua  y  baja  de  ponto  so  mieL 

1.948.  (kmaerva  dé  cidro. — Se  lee  quito  á  cochillo  so  pri- 
mera caecarito,  ae  echan  á  la  agua  y  ae  ponen  al  aol;  ae  mu- 
dan aguas  diariamente,  ae  prueba  y  cuando  ya  no  amargan 
asechan  en  el  almíbar  fina,  dan  un  hervotvy  se  apartan,  al  día 
siguiente  oteo  y  otro,  al  otro  día  con.  agua  de  asahar,  «e 
calan  y  se  da  punto  á  la  miel:  esto  conserva  ose  hace  en  ga- 
jos 6  en  trpcitos  ó  en  ruedas;  para  éstas,  hechas  las  rebana- 
das de  limón,  con  cuchillo,  se  va  partiendo  y  sacando  una 
tela  ó  oorrea  larga  y  delgada,  la  cual  se  enrolla,  se  asegura 
pasándole  una  aguja  con- hebra  para -que  no  se  desenvuelva 
con  todo  el  manojo  que  tiene;  hasta  lo  último  que  se  le  qui- 
ta la  hebra,  y  se  le  echa  asahar. 

1.949.  Conserva  de  sandía. — De  las  grandes  se  quito  la 
cascara  gruesa  con  algo  de  la  colorada,  se  limpia  de  la  cor- 
teza dura;  se  pone  al  sol,  mudándole  agua  diariamente  has- 
ta que  está  muy  blanca,  se  echa  en  buena  almíbar,  picotea- 
da para  que  cale,  y  para  probar  si  está  se  pica  cotí  un  popo- 
te; no  se  le  echa  agua  fria  porque  se  pierde  y  percude,  pero 
sí  de  asahar  á  qué^ooír  ella  dé*  on  herrof-  violento,'  pues  si 
es  oón  lentitud  sé  ennegrece?  y.- - 

1 .950.  Con$erva  de  ¿oco,  jicama  ypifto.  —La  pifia  se  lim- 
pía  y  hace  pedácitót,  se  desflema  -agua  de  sal  y  tequ'esqni- 
te  y  se  cuece  el  coco,  se  limpia  y  sé  ralla.  La  jicama' se  la- 
va en  agua  caliente  y  se  ralle;  se  hace  almíbar  fina,  se  echa 
la  pifia,  da  un  hervor  y  sé  echa  él  coco,  da  otro  hervor  y  se 
echa  la  jicama,  y  sigue  hirviendo  hasta  qué  todo  cale  y -es- 
té' bien  conservado  y  dé*  punto;  se  le  echa  agua  de  azahar. 

1.951.  Gtnmrva  de  jicama  y  coco. — Se  cuece  en  dos  her- 


216 

vores  la  jicama  después  de  raida,  y  se  cuela  por  ün  cedazo, 
se  limpia  y  ralla  el  coco  y  se  juntan,  se  enjuagan  ambos  con 
agua  caliente  y  se  vuelven  á  colar;  se  ponen  á  conservar  en 
buen  almíbar,  se  les  da  su  punto  y  se  les  echa  agua  de 
azahar. 

1,952.  Conserta  de  pina. — Se  limpia  y  rebana  á  lo  largo 
en  tajadas  como  las  de  melón,  se  le  quita  el  corazón  y  se 
cuece  con  sal;  da  tres  ó  cuatro  hervores  y  se  deja  enfriar, 
se  pasa  á  otra  agua  por.  veinticuatro  horas,  se  desflema, 
se  enjuaga  y  se  echa  en  buen  almíbar,  se  le  da  un  hervor 
cada  dia  por  espacio  do  tresnen  el  último 'te  le  da.  punto  á 
la  miel  y  se  le  echa  agua  de  azahar. 

1,96*3.  Conserva  de  pera.  — Cocidas  con  cascara  y  no  muy 
blandas  se  mondan  y  se  echan  en  agua  fría,  mudándolas  de 
una  á  otra  agua  para  que  queden  blancas;  se  echan  después 
en  una  almíbar  fria,  y  se  ponen  á  hervir  violentamente  pa- 
ra que  no  se  pongan  coloradas;  se  echa  agua  de  azahar, 
unos  clavos  y  •  rajas  de  canela. 

*  1,964  Conserva  de  pera  parda. — Se  pone  á  cocer  en 
una  olla  con  zacate  de  carbón  en  el  fondo  y  agua  dé  te* 
quesquítéj  y  estando  cocida,  se  monda  y  sé  pesa» '  Para  cada 
libra  de  pera  se  ponen  cinco  de  azocar.  Si  son  para  guar- 
darlas algún  tiempo  se  les  agregan  dos  libras  de  azúcar  cla- 
rificada con  unas  cucharadas  de  salsa  de  durazno,  lo  que 
basta  para  que  tome  punto.  Se  echan  las  peras  y  se  les  da 
punto  doa  dias  y  es  bastante.  Lo  mismo  puede- hacerse  con 
la  pera  bergamota. 

1,966.  Conserva  de  biznaga;— Se  monda  y  corta  con  un 
molde  de  hoja  de  lata  labrado,  se  cuece  hasta  que  ablande, 


216 

•e  echa  cuatro  días  á  desflemar  mudándole  aguas  y  luego 
se  observa  lo  demás  dicho. 

1,066.  Cbnasrca  efe  sonoAorto. — Limpia,  y  sin  oorason  da 
un  hervor,  te  desflema  al  sol  mudándole  aguas  y  probando* 
la  hasta  que  pierda  su  sabor,  se  echa  en  almíbar,  y  hierre 
hasta  calar  y  ponerse  anteada»  se  enfria  y  echa  el  olor  de 


1.967.  Oonmrwa  de  papaya* — Mondada  y  bien  limpia  de 
sos  tripas  y  pepita,  se  cuece,  después  se  lava  y  para  que 
blanquee  se  pone  al  sol  tendida  en  tablero  todo  el  día 
hasta  la  noche,  que  se  echa  en  agua,  y  al  otro  dia  en  miel 
de  asacar  fina  bien  clarificada,  y  de  medio*  punto;  se  pone  á 
conservar  en  ella  como  se  ha  dicho  y  se  le  echa  olor  como  á 
todas  las  conservas. 

1.968.  Conetroa  de  xüacofote. — Esta  se  hace  al  estilo  de 
la  anterior,  partiendo  de  un  tamaño  regular  los  troaos,  y  lo 
mismo  la  de  la  calabaza,  con  la  advertencia,  de  que  los  tro- 
sos  de  ésta  estarán  veinticuatro  horas  en  infusión  de  agua 
de  cal  asentada;  esta  se  prueba,  que  agarre  la  lengua,  des- 
pués se  enjuaga  y  pone  á  cocer,  probando  su  cocimiento 
con  un  jpopota  con  que  se  pica,  y  ai  el  popote  la  pasa  con 
facilidad,  estará  cocida;  se  echa  en  agua  fría  y  de  ésta  al  al- 
míbar fino  bien  clarificado,,  oolado  y  de  medio  punto  y  ca- 
liente. 

1,959.  Conserva  de  toronja. — O  se  mondan  6  ee  rallan  de 
la  tes  amarilla,  sin  desperdicio  de  carne,  se  cuecen  hasta 
que  esté*n  suaves  en  lejía  fuerte  de  cenia  6  tequesquite,  se 
enjuagan  bien  y  dejan  á  desflemar  en  otra  agua  que  diaria- 
mente ó  dos  veces  al  dia  se  les  muda  hasta  que  nada  amar- 


217 

guen;  ge  escurren,  y  conservan  como  se  dijo  de  la  cidra  y  li- 
món real. 

1.960.  Conserva  de  zabila. — Se  hace  lo  mismo  que  lasan* 
día,  con  la  diferencia  que  se  desflema  los  dias  necesarios 
mudando  aguas  calientes,  como  también  á  la  sandía,  la  cual 
necesita  menos  tiempo  para  desflemar. 

1.961.  Conserva  de  betabel. — Cocidos  con  sus  rabos  y  pa- 
nela se  limpian  y  rebanan,  se  ponen  en  almíbar  fino  con  una 
pifia  rebanada;  para  que  tome  gusto,  rajas  de  canela  y  cía-* 
vos  sueltos,  se  conserva  basta  que  cale  y  luego  se  aparta  á 
que  quede  solo  el  betabel. 

1.962.  Conserva  de  xoconotúe.  —Mondados  y  cocidos  se 
desfleman  como  la  cidra  mudándole  agua  diariamente  hasta 
que  están  muy  blancos  y  suaves,  se  les  quita  la  coronita  y 
se  seca  la  pepita  sin  romperlos;  se  echan  en  almíbar  fino  bien 
clarificado,  colado  y  de  medio  punto,  rellenos  de  pasta  de 
coco  6  de  otra,  se  les  da  punto  de  consejrva,  se  les  echa 
azahar  y  olor. 

1.963.  Conserva  de  calabaza.— Se  limpia  la  calabaza,  se 
echa  en  agua  de  cal  una  hora  entera;  ya  está  prevenido  un 
cazo  con  agua  hirviendo  y  se  echa  allí,  y  así  que  se  cueza  se 
saca,  y  echada  en  agua  fría,  se  deja  hasta  otro  dia;  se  hace 
el  almíbar  y  se  echa  allí  á  que  dé*  tres  hervores,  se  echa  has* 
ta  que  se  enfria  el  almíbar. 

1.964.  Conserva  de  zafm$nora.~-Seecha  en  agua  con  tan- 
tita  sal  una  libra  de  zarzamora,  y  á  otro  dia  temprano  se  le 
muda  agua  dándole  dos  6  tres  enjugadas;  se  ponen  á  cía* 
rificar  dos  libras  de  azúcar,  y  se  deja  enfriar,  y  ya  escurrida 
la  zarzamora  se  le  echa  una  raja  de  canela  y  así  que  es- 
tá hirviendo  se  le  echan  unas  gotas  de  limón  y  con  una  pi* 


Mft 

chancha  te  le  mma  las  pepitas  con  cuidado  pera  qué  no  te 
desbarate;  el  punto  te  toma  en  loe  dedos  hasta  qae  te  «en» 
U  habosita. 

1,966.  TTrafe  ó  Hta  petaaVi.— Quitando  con  sutileza  el  pe* 
llejito  te  echen  en  agua  fría,  te  tacan,  y  patán  al  almíbar 
de  azúcar  Manca  maciza  y  bien  clarificada;  la  pepita  que 
suelta  con  el  hervor  te  quita  con  una  cuchara  de  metal  y  te 
aparta  de  la  lumbre  en  cuanto  este*  conservada. 

1,966.  Jlansvtfut*  mechada**  —Las  manzanas  que  sirven 
para  dulce  han  de  tener  algún  agrio  y  para  mechar  loa  pe- 
rones ton  mejor,  6  las  manzanas  de. el  tiempo  de  muertos, 
que  son  las  mas  jaleosat;  se  mondan  y  descorazonan  y  van 
echando  en  agua  fria,  se  hace  almíbar  fina  bien  clarificada 
y  en  hervor  violento  te  echan  las  manzanas  y  conforme  van 
calando  se  sacan  y  val:  colocando  en  el  platón  con  arden: 
fce  qneda  cociendo  el  almíbar  á  f  pego  violento  hasta  tomar 
pnnto  de  jalea,  y  se.  ayuda  con  una  poca  de  la  de  tejocotes 
ni  la  hay  y  ti  no  se  echan  unos  corazones  de  membrillo  en 
sigua  hirviendo,  y  la  baba  de  éstos  se  revuelve  en  el  ahnf* 
har,  y  ya  de. punto  te  pone  por.  encima  la.  manzana  y  se 
adorna. 

.  1,967.  Majadero. — Diez  cuartillos  de  leche,  una  libra  de 
arroz  remojado  y  media  en  -seco  en  dos  onzas  de  almidón 
cernido,  se  cuece  con  la  leche  bien  endulzada;  cuando  quie- 
ra temar  punto  se  le  echan  yemas  ¿  que  quede  amarillo;  es- 
tas se  baten  con  tantita  agua  y  una  pechuga  deshebrada  y 
agua  de  azahar  y  se.  le  da  punto  de  manjar  blanco. 

1,968.  Ázucarülo*  6  panales.— Tóxneae  media  arroba  de 
asacar  blanca  superior,,  .echándole  tantos  cuartillos  de  agua 
como  libras  de  azúcar;  batiendo  media  docena  de  huevos; 


210 

se  quita  tm  poco  de  la.  dicha  agua»  y  en. Ja  restante  se  echa 
el  asacar,  poniéndola  á  la  lumbre  hasta  que  principie  á  co- 
cer, echando  el  agua  que  anteriormente  .se,  apartó;  cuando 
haya  subido  tres  Teces  y  tenga  el  punto  del  caramelo,  se 
pasa  por  una  bayeta  á  otro  cazo,  poniéndolo  ¿  la  lumbre 
hasta  darle  el  punto  de  hebra  regular,  batiendo  tres  claras 
de  huevo  con  asacar,  meneándola  hasta  que  se  enfrie,  echan* 
do. un  poco  de  zumo  de  limón:  después  se  pone  á  la  lumbre 
la  parte  de  azúcar  á  tomar  punto,  echando  dos  6  tres  gotas 
de  aceite;  se  tiene  preparado  un  poco  del  baflo,  apartando- 
lo  de  la  lumbre  y  batiéndolo  mucho;  se  ponen  encima  de 
una  tabla  unos  palos  blancos,  despegándolo  de  los  papelea 
y  cortándolo  con  una  sierra  pequeña  hasta  concluir. 

1,969.  Manera  de  cubrir  toe  tarro*  de  dulce.  — Téngase  cui- 
dado de  no  dejar  enfriar  los  dulces  en  el. cáseo;  échense  ca- 
lientes en  los  tarros,  que  se  dejarán  descubiertos  en  sitio  en 
que  no  haya  humedad  durante  veinticuatro  horas;  se  cor* 
tari  unos  papeles  del  grandor  y  forma  de  la  boca  de  los  tar- 
ros, se  empapan  en  buen  aguardiente  y  se  ponen  sobre  el 
mismo  dulce;  encima  se  pone  otro  papel  grueso  6  cartulina 
cuidando  que  éste  no  toque  al  dulce;  se  atan  y  se  .guardan 
en  sitio  seco. 

1970.  Mazapán. — Se  mondan  una  libra  de  almendras 
dulces  y  cuatro  onsas  de  amargas.  Después  que  estén  bien 
secas  en  un  comal,  se  majan,  se  clarifica  una  libra  de  azú- 
car y  se  cuece  ligeramente;  se  saca  del  fqejtpúy'se.  le  añade 
la  pasta  de  almendras;  se  pone  la  cacerola  á  la  lumbre  me- 
neándola para  que  la  pasta  no  se  queme.  Guando  esté  co- 
cida, que  será  cuando  no  se  pegue  á  la  mano,  se'eeba  sobre 
una  mesa  polvoreada  de  asacar,  dejándpla  enfriar.   Luego 


290 

to  cortan  Ioí  mazapanes-  de  la  figura  que  se  quieran  para  co- 
locarlos aobVe  una  hoja  de  papel  y  hacerlos  oocer  al  horno. 
1971.  Mazapanes  de  dulces.— La  tola  diferencia  de  estos 
á  loa  precedente*  es,  que  en  lugar  de  fratase  echa  poco  mas 
6  menos  Igual  peso  de  dulce  6  mermelada. 

1.972.  Mazapanes y alm**dtad(>$.~&* hacen  asearen  la 
estufa  una  cuarta  parte  de  almendras  amargas  para  tres  de 
almendras  dulces,  unas  y  otras  bien  mondadas;  redúzcanse 
á  pasta  machacándolas  y  humedeciéndolas  i  medida  con  cla- 
ra de  huevo  batida»  8e  toma  igual  peso  de  asnear»  en  la. 
que,  después  de  clarificada  y  que  forme  bolitas,  se  echa  la 
pasta,  se  hace  cocer,  meneándola  continuamente  hasta  que 
puesta  en  el  dedo  se  agarre.  En  este  estado  se  extiende  so* 
bre  una  mesa  que  se  habrá  espolvoreado  con  asacar  en  pol- 
vo. Se  extiende  hasta  que  q'uede  muy  delgada,  y  se  corta 
en  pedacítos  de  la  forma  que  se  quiera;  hay  que  ponerlos  al 
fuego  para  que  se  acaben  de  hacer  y  bañarlos. 

Los  almendrados  se  diferencian  de  los  masapanes  solo  por 
su  figura;  se  cortan  redondos  y  un  poco  bombeados  hacia  el 
medio  superior. 

1.973.  Af(waptíiiefc^ái/er«ntefyh**u. —^preparan oomo 
los  precedentes.  Después  de  echada  la  masa  en  el  azúcar 
clarificada,  se  aftade  una  tercera  parta  de  peso  de  la  fruta 
que  se  quiera  estrujada  y  pasada  por  tamiz. 

1.974.  Mazapanes  de  'eaocoÍaia,~-*Son  los  mismos,  reem- 
plazando con  chocolate  raspado  al  tiempo  de  cocer  la  masa, 
las  frutas  6  dulces. 

1.975.  Mazapanes  de  fresas.  Se  reduoe  á  pasta  una  libra 
de  almendra  dulce,  añadiendo  seis  onzas  de  azúcar  y  seis 
de  fresas  estrujadas  y  pasadas  por  tamiz;  oonoluyendo  como 


225 

servilleta,  se  amarra  y  se  pone-  á  cocer;  ya  cocida  se  saca  de 
la  servilleta,  se  rebana  y  se  adereza  con  aceite  y  vinagre. 

728.  Despeja»  é  higadillo  de  guajolote. — Se  parten  en  pe- 
dazos y  se  ponen  dorante  ana  6*  dos  horas  eri  agua  fría  para 
que  se  ponga  blanca  la  carne:  después  de  escurrirlos  bien  se 
pone  en  una  cazuela  un  pedazo  de  manteca  y  una  cucharada 
de  harina,  dando  vueltas  hasta  que  la  manteca  se  haya  de- 
rretido, humedeciéndola  en  seguida  con  un  vaso  de  agua; 
añádase  á  esto  sal,  pimienta,  nuez  moscada  rallada,  un  ma- 
nojito  de  perejil  y  cebollitas  verdes.  Échense  los  despojos 
en  este  recaudo  y  déjense  cocer  tres  cuartos  de  hora;  por 
separado  se  echarán  en  la  salsa  tres  yemas  de  huevo  y  zumo 
de  limón,  agraz  6  un  roció  de  .vinagre.  Ya  casi  cocidos  los 
despojos,  se  les  echa  unos  chiles  en  rajas  y  se  deja  cocer, 
tapando  la  cazuela  con  un  papel  de  estraza.  Se  adorna  con 
papas  fritas  en  rebanadas,  y  rebanadas  de  pan  tostado. 

729.  Otros  despojos  de  guajolote. — Se  hacen  trozos  y  se  re- 
hogan con  manteca,  se  polvorean  con  harina  y  se  humede- 
cen con  caldo  6  agua,  sazonándolos  con  pimienta,  sal  y  un 
ramo  de  todas  yerbas.  Se  cuecen  añadiendo  dos  nabos  pa- 
sados por  manteca  hasta  que  hayan  tomado  color,  después 
ae  escurren  y  adornan  con  papas  fritas  en  rebanadas. 

730.  QuajohU  condimentado  con  su  propia  grasa. — Des- 
pués de  chamuscado  y  destripado,  se  le  tuercen  las  piernas 
y  se  pasa  por  manteca.  Se  pone  en  el  fondo  de  una  capero- 
la  tajadas  de  ternera  y  sobre  ellas  el  ave,  con  la  pechuga 
hacia  abajo,  cubriéndola  con  lonjas  de  tocino;  hecho  esto 
se  le  echa  caldo,  sazonándolo  con  pimienta,  sal  y  un  mano- 
jo de  yerbas.  Así  cocerá  á  fuego  manso  y  cuando  ya  lo  este* 

ul  ooonrau  poblana. — tojl— i,  15 


sepasseloeldopor  tamis,se  desengrase  y  m  sirve  dena- 
mandólo  por  encima  del  guajolote. 

731.  Picadith  de  guajolote. — Se  quitan  toda*  las  mem- 
branas y  tendones  de  las  carnes  del  guajolote ;  cocido  el  res* 
to,  se  pica  muy  menudo  y  se  sirve  con  un  adereso  de  pan 
tostado.  Por  encima  se  pueden  poner  algunos  hueros  es- 
trellados. 

782.-  Guajolote  atado. — Después  de  limpio,  se  .tiene  al  ai- 
re libre  Teintícuatro  horas,  y  después  se  éneos  en  una  olla; 
ouandoestf  ámeóHo  oocersesaoa?  se  pone  en  el  asador 
con  manteca  y  un  polvo  de  sal  y  pimienta;  se  meten  unos 
clavillos  de  especia  por  el  pecho  y  piernas,  y  poniéndolo 
bien  envuelto  en  un  papel  de  estrena,  se  ata  bien  y  se  pone 
á  fuego  lento;  cuando  este*  bien  asado,  se  hace  una  salsa  con 
un  poco  de  asnear,  sumo  de  limón,  canela,  pimienta  y  cal- 
do, que  se  le  roda  por  encima. 

738.  Guajolote  relleno, — Hágase  un  picado  de  carne  y  ja- 
món, sal,  pimienta  y  un  par  de  huevos  con  perejil  y  ajo,  y 
también  se  ponen  ciruelas-pasas;  se  frie  oon  manteca  y  se 
rellena  el  guajolote,  después  se  asa. 

784.  Guajolote  en  papel — Sé  limpia  y  tiene  al  aire  libre 
veinticuatro  horas,  y  después  se  caeos  en.  una  olla;  i  medio 
cocer  se  pone  en  el  asador  oon  manteca  y  un  polvo  de  sal  y 
pimienta;  se  meten  unos  clavillos  dé  especias  y  se  envuelve 
en  un  papel  de  estrasa  y  se  deja  á  fuego  lento;  cuando  esté' 
asado  se  haoe  una  salsa  con  un  poco  de  asacar,  sumo  de  li- 
món, canela,  pimienta  y  caldo,  que  se  le  roda  por  ondina. 

786.  Pepitoria  de  guajalote. — Después  de  limpio  con  una 
servilleta,  seca,  se  pone  en  pedazo*  á  rehogar  con  tocino  pi- 
cado 6  manteca,  ajo,  perejil,  sal  y  un  poco  de  pimienta; 


927 

échesele  después  un  poco  de  caldo  de  puchero,  y  se  Jiace 
una  salsa  con  clavillo  de  especia,  ajo  tostado»  perejil,  anas , 
avellanas  y  una  yema  dé  huevo»  desliase  con  el  mismo  cal- 
do, y  se  echa  en  el  puchero  á  que  cueza  un  rato;  para  que 
la  salsa  no  esté*  espesa,  se  le  echará  un  par  de  yemas  de 
huevo. 

786.  Alones  de  guajolote  á  las  yerbas,  —Se'  íes  quitan  los 
huesos,  y  después,  de  bien  desplumados  y  descañonados,  se 
escaldan  ligeramente  en  agua  hirviendp,  se  cubren  de  pe- 
dacitos  de  tocino,  que  se  pasan  de  parte  á  parte.  Se  cue- 
cen como  la  pipila  en  adobo, .  cubriéndolos  con  un  papel 
bien  empapado  en  manteca;  luego  que  estén  bien  cocidos, 
se  ponen  en  una  salsa  6  guiso  de  yerbas. 

737.  Pipila  en  asador. — Quítensela  las  tripas,  se  limpia  y 
compone;  cúbrase  con  una  capa  de  lonjas  de  jamón  magro 
si  está  muy  gorda,  y  en  caso  contrario,  méchese  con  tiritas 
de  jamón  gordo  y  cúbrase  con  un  papel  engrasado,  que  se 
quita  cuando  esté'  medio  cocida,  para  que  tome  buen  color; 
sírvase  regada  de  caldo. 

738.  Guajolote  en  adobo.-— Pélese  y  vacíese  un  guajolote 
viejo,  y  métansele  las  patas  en  el  cuerpo,  sé  le  dan  unas 
vueltas  sobre  las  brasas,  cúbrase  dfx  lonjas  gordas  de  jamón 
bien, sazonadas,  y  envuélvase  en  un  lienzo,  que  se  cose;  pón- 
gase en  un  puchero  justo  ásu  grandor,'  póngase  con  él  des- 
perdicios de  ternera,  rajas  de  jamón  y  una  pata  de  ternera; 
humedézcase  con  un  cuartillo  de  vino  blanco  ó,  una  capa  de 
aguardiente,  caldo,  rafees,  cebollas*  un  ramo  de.jperejíí  y 
yerbas  finas,  sal,  pimienta»  ajo,  laurel;  hágase  cocer  ¿fuego 
lento  y  vuélvase.  Después  de  cocido,  pásese  el  caldo  por 
eltamiz  y  hágase  disminuir  hasta,  que  quede  hecho  jaleti- 


na,  qué  m  dejará  enfriar;  extiéndale  sobre  el  guajolote, 
coloqúese  en  él  platón  sobre  una  servilleta,  guarnecido  de 
perejil  verde.  8e  paede  también  servir  caliente,  reducien- 
do á  salsa  parte  de  la  jaletina. 

789.  Pipila  d  lo  casero.— Después  dé  limpia  y  preparada, 
aplástesela  un  poco  el  pecho,  málvensele  las  patas;  en  la 
cacerola  se  pone  manteca,  perejil,  cebolla,  chiles,  ajo,  todo 
muy  bien  picado;  en  esta  meada  dense  unas  vueltas  á  la 
parrilla  y  pásese  el  todo  á  otra  cacerola  conveniente  al  gran- 
dor de  ella,  donde  se  pone  esta,  cubierto  su  pecho  con  lon- 
jas de  tocino,  y  bien  sazonada  con  sal  en  grano  y  pimienta, 
mojándola  con  un  vaso  de  vino  blanco  y  otro,  tanto  de  cal- 
do del  puchero:  si  ño  se  tiene  vino  blanco,  se  puede  reem- 
plasar  con  medio  vaso  de  buen  aguardiente;  cuácase  á  fue- 
go lento;  y  se  afiade  un  poco  de  caldo  colado  para  espesar 
la  salsa. 

740.  Despojo*  de  guajolote.— Se  cuecen  con  sal,  y  después 
de  dar  un  hervor,  se  fríen  con  manteca  y  un  poco  de  hari- 
na, se  echa  un  poco  de  chile  verde,  canela,  perejil  y  jamón 
picado,  se  deja  cocer  á  fuego  lento,  y  se  sirve  á  las  dos 
horas. 

741.  AftnudÜlo*  de  guajolote  d  la  casera. — Los  menudillos 
del  guajolote  comprenden  los  alones,  las  patas,  el  pescuezo 
y  la  molleja;  después  de  bien  escaldado  y  desencañonado 
todo,  se  pone  en  una  cacerola  con  manteca,  un  manojito  de 
perejil,  cebolla,  unos  ajos,  dos  clavos,  tomillo  y  laurel;  se 
pone  al  fuego  y  se  echa  una  buena  cucharada  de  harina,  se 
afiade  con  caldo  del  puchero  6  caído  de  sastancias,  se  sazo- 
na lo  necesario  y  se  añaden  algunos  nabos,  que  se  rehogan 
antes  en  la  sartén  hasta  que  tengan  un  color  dotado,  se  po- 


239 


nen  a  cocer,  y  «i  la  salsa  está,  demasiado  citó*,  se  dejare? 
ducir  en  el  fuego. 

742.  MentáiUoidéguajolvUá  l*  judia. — Preparado*  co- 
mo y»  se  ha  dicho,  te  ponen  á  pocer  oomo  la  pipila  en  ado- 
bo; después  de  cocidos  se  fríen  uno*  nabos  en  manteca  bas- 
ta que  tomen  un  buen  color  y  se  sacan  de  la  manteca;  en  la 
misma  ae  echa  una.  cucharada  de  harina,  ae  hace  con  ellas 
una  masay  que  ae  deslíe  en  el  caldo  de  loa  menudillos,  se  le 
hace  cocer  hasta  que  espese,  se  cuela  y  que-  cuezan  en  esta 
salsa  los  nabos;  se  echa  un  terrón  de  asnear,  se  colocan  los 
menudillos  en  un  platón,  se  adornan  y  cubren  con  los  nai- 
boa, y  por  encima  del  todo  se  echa  la  salsa. 

643.  Onúado  de  pato. — Se  pelan  y  destripan  los  patos,  y 

i 

después  de  bien  lavados  y  quitada  la  rabadilla,  se  echan  en 
una  olla  con  agua  y  paja,  y  ya  que  dieron  nnos  hervores  se 
quitan  de  la  lumbre,  se  les  da  una  6  dos  lavadas  .con  agua 
caliente,  después  se  parten  en  cuartos,  se-  echa  manteca  en 
uña  cazuela  y  allí  se  echan  los  patos  con  unas  rebanadas  de 
jamón  y  bastante  cebolla  picada  y  ajo  y  sé  deja  freir  todo 
bien.  Después  se  le  echa  agua  y  un  poco'  de  perejil  picado, 
tomillo  y  orégano,  y  se  muele  clavo,  canela  y  pimienta  con 
unas  rebanadas  de.  pan  frito.  Se  adorna  el  platón  con  chi- 
les, aloaparraa  y  aceitunas. 

744.  Otro  de  pato.  — Se-  hace  lo  mismo  que  el  anterior  has- 

ta  donde  se  dice  que  se  echa  la  manteca  en  una  cazuela. 

'  •  ■       *•  *       *  .      •     •     . 

Cuando  est¿  caliente  se  echan  los  patos,  dos  6  tires  jitoma- 
tes y  dos  manojos  de  cebolla  y  un  poco  de  perejil  picado,  y 
esto  ae  echa  opn  la  carne:  ya  que  se  frió  todo  se  leí  echa  ha- 
rina y.  a*  ¿eje  freír  otro  poco;  luego  se  le  echa  agua,  se  mué- 


290 

la  clavo,  canal*  y  pimienta,  se  echa  an  al  guiso  y  aa  adorna 
como  al  anterior.     Ha  da  quedar  al  caldillo  espeto. 

746.  Otro  dé  pato.— Se  hace  lo  mismo  que  loa  anterioras. 
Sopona  una  casoelita  con  manteca,  aa  pica  ajo,  perejil  y 
cebolla,  rebanadas  da  jamón,  y  todo  se  frie  junto  con  al  pa- 
ta 8e  pican  unos  nabos  delgados  y  aa  fríen  con  manteca; 
junto  con  claro,  canela  y  pimienta  y  aa  echa  otra  ras  don* 
da  está  todo;  se  la  agrega  agua  para  que  saaone;  aa  rebanan 
otros  nabos  y  se  echan;  se  fríen  rebanadas  da  pan,  se  mue- 
len y  se  la  añadan;  ha  de  quedar  el  guiso  espeso  y  antas  da 
apearlo!  da  la  lumbre  sa  les  pona  riño  de  Jerez.  Se  ador- 
na como  los  anterioras.  "' 

746.  B$cabtch*  de  pato*. — Después  de  cocidos  con  paja  y 
oortadas  las  rabadillas,  se  limpian  y  enjugan  con  un  trapo, 
se  deshuesan  y  revuelcan  en  harina,  sa  frían  an  manteca, 
se  sacan  y  sa  van  poniendo  en  capas  dentro  da  una  olla. 
Entra  dos  capas  da  pato  se  echa  u*a  da  sal  y  pimienta,  yer- 
ban aromáticas  en  polvo,  ajos  fritos,  aceita  y  vinagre;  aa  ta- 
pa la  olla  y  se  deja  an  infusión  por  tras  6  cuatro  horas;  sa 
tapa  muy  apretada  con  una  tapa  de  palo  y  aa  deja  cinco  6 


747.  Paio  matador. — Prefiérase  un  pato  hembra,  des- 
plúmase y  queme  en  llama  de  papal,  quítense  las  alas  y  al 
pescuezo,  córtense  los  extremos  de  las  patas,  vuélvanse  ha- 
cia fuera,  y  sa  ata  antes  de  ponerlo  en  el  asador;  frótese  con 
su  mismo  hígado  y  se  envuelve  en  un  papel,  que  sa  quita 
cuando  este'  casi  asado.  Se  sirve  bien  calienta,  con  dosli- 
monas  enteros. . 

748.  Poto  en  aceituna*.  —Despúas  da  bien  preparado  y 
arreglado,  sa  la  dan  unas  vueltas  an  una  cacerola  con  pe- 


231 

dazos  de  tocino,  se  echa  una  media  libra  de 
échense  en  la  cacerola  donde  está  el  pato,  y  se  dejan  nnos 
cuantos  minutos.  Se  sirve  el  pato  rodeado  de  las  aceitunas. 
740.  Pato  en  nabo*  á  lo  cauro. — Preparado  como  el  ante- 
rior, póngase  un  poco  de  manteca  en  la  cacerola,  y  en  ésta 
se  dan  unas  vueltas  al  pato,  y  algunos  liaros;  en  seguida  se 
retiran  y  en  la  manteca  se  echa  una  cucharada  de  harina, 
se  hace  enrojecer  esta  mezcla,  que  se  añade  con  caldo  del 
puchero,  se  vuelven  á  poner  el  pato  y  los  nabos  con  un  ra- 
raito  de  perejil,  sal  y  pimienta;  si  los  nabos  estuviesen  ya 
tiernos,  no  deberán  echarse  hasta  que  el  pato  esté*  casi  co- 
cido; hecho  el  guiso,  se  deja  menguar  si  es  necesario,  y  sír- 
vase todo  junto. 

750.  Pato  en  chícharo*  y  otras  legumbres. — Luego  que  es- 
tá el  pato  preparado  y  cocido  como  está  indicado  para  el 
pato  en  salsa,  se  sirve  lo  mismo  y  se  cubre  con  un  guiso  de 
chícharos. 

Empléese  el  mismo  método  para  el  pato  con  cebollas. 

751.  Ganso  en  asador. — Escójase  uno  jdven  y  que  tenga 
su  gordo  bien  blanco,  desplúmese  y  pásese  por  las  llamas; 
se  le  quitan  los  alones  y  las  uñas,  se  ata  dejándole  las  pa- 
tas, se  pone  en  el  asador  en  seguida  y  se  asa.  Es  menester 
hacer  salir  el  jugo  de  las  pechugas,  pinchándole  con  un  cu- 
chillo. -  - 

752.  Ganso  relleno  y  asado  á  la  inglesa. — Prepárese  como 
el  .anterior,  y  llénese  el  cuerpo  con  una  mésela  hecha  con  su 
hígado  picado,  cebollas  en  pedacitos  y  un  polvito  de  salvia 
picada,  todo  bien  mezclado,  rehogado  en  manteca  hasta  que 
tome  color  dorado.  Se  pone  en  el  asador,  y  después  de 
do  se  sirve  con  jugo  de  ternera  6  vaca. 


753.  Gamo  reüeno  dé  eattallai  y  atufa. — Prepárese  oomo 
queda  dicho,  rehogúese  sa  hígado  prado  en  manteo  oon 
ana  cebolla  en  pedacitos,  afiádase  suficiente  cantidad  de  cas- 
tafiaa  preparadas  como  ae  ha  dicho  para  el  para  de  éstas. 
Sazónese  esta  mésela  á  buen  gasto  y  llénese  con  ella  el  cuer- 
po del  ganso,  mátasele  hacia  dentro  la  rabadilla  y  cósase  por 
el  vientre  y  por  la  vejiga;  cinco  cuartos  de  hora  antes  de  ser- 
Tirio  se  pone  en  el  asador.  Obsérvese  el  mismo  grado  de 
asado  que  si  no  estuviera  relleno. 

754.  Chatio  en  adobo. — Tómese  con  preferencia  un  ganso 
ya  viejo,  vacíese  y  sujétensele  las  patas  dentro  del  cuerpo, 
escáldese  y  desencaflónese;  se  mecha  en  seguida  todo  su  cuer- 
po oon  tiras  de  tocino  envueltas  en  pan  rallado  y  sazonadas 
oon  perejil,  cebollas,  ajos,  todo  bien  picado;  una  hoja  de 
laurel,  tomillo,  basílica,  casi  reducidos  á  polvo,  sal,  pimien- 
ta y  núes  moscada;  después  de  mechado  se  ata  y  coloca  en 
una  olla  de  su  medida  con  dos  vasos  de  agua,  dos  de  vino 
blanco,  medio  de  aguardiente,  cebollas  y  zanahorias,  sal  y 
pimienta;  tápese  bien  la  olla  y  hágase  cocer  á  fuego  lento 
por  espacio  de  cuatro  horas:  concluido  de  cocer,  póngase  el 
adobo  en  un  platón;  si  la  salsa  está  muy  clara,  redúzcase  y 
riégúese  oon  ella  .el  ganso,  después  de  guarnecido  ém  zana- 
horias y  cebollas  cocidas  con  el  misma  También  se  puede 
dejar  enfriar,  regarla  con  la  misma  salsa  y  no  servirlo  hasta 
que  ésta  esté  hecha  jaletina:  pero  este  método  no  es  el  mas 
usado.     Se  prefiere  siempre  el  ganso  caliente. 

750.  Ganso  para  viajeros.— Para  asarlos  seles  untará  ana 
salsa  hecha  de  manteca,  ajo  machacado,  sal,  pimienta  y  agrió 
de  limón,  y  después  de  asados  se  rociarán  con 
tibio. 


283 

766.  Quitado  <U  agachona*. -~T>e*pxifs9  de  peladas  las  aga- 
chonas sin  lavarlas,  se  asan  en  una  parrilla,  luego  se  sacan 
las  tripas  y  se  muelen  con  clavo,  canela  y  pimienta.  Se  pi- 
ca bastante  cebolla  y  ajo,  se  fríe,  y  ya  que  está  bien  frito 
se  le  echan  las  tripas  molidas  y  un  poco  de  caldo  de  la  olla, 
antes  de  echarle  azafrán,  si  es  que  se  le  echa.  Se  ponen 
luego  las  agachonas  en  el  frito  á  que  se  cuezan.  Se  agrega 
un  poco  de  tomillo,  unas  hojas  de. laurel,  bastante  Tino  car- 
Ion,  unas  rebanadas  de  pan  tostado  y  se  colocan  abajo  del 
platón  y  encima  las  agachonas. 

757.  Otro  de  agachona*. — Se  pelan  y  abren  y  se  juntan 
las  tripas,  mollejas  é  hígado*.  Se  echa  manteca  en  una  ca- 
zuela y  allí  se  echan  las  agachonas  con  pedazos  de  jamón, 
bastante  cebolla  picada  muy  menuda,  un  poco  de  ajo  tam- 
bién picado.  Las  tripas,  mollejas  é  hígado,  después  de  la- 
vados y  molidos  se  fríen  y  se  echan  en  la  cazuela  con  un  po- 
co de  vino  carlon,  claro,  canela,  pimienta  y  un  poco  de  to- 
millo. 

758.  Tórtolas  al  minuto. — Se  despluman,  vacian  y  arre- 
glan una  docena  de  tórtolas,  se  les  dá  una  vuelta  en  la  ca- 
cerola en  manteca  y  sal;  cuando  hayan  tomado  color,  aña- 
dir chile,  ajos  y  perejil  picados,  un  polvo  de  harina,  vino 
blanco  y  caldo;  luego  que  la  salsa  empiece  á  cocer  se  sacan 
las  tórtolas,  y  se  sirven  con  cortezas  de  pan  fritas. 

769.  Tórtola*  en  salmorejo  d  lo  casero. — Se  toman  tórto- 
las* asadas  y  frías,  se  les  quita  la  cabeza  y  lo  interior  del 
vientre,  las  mollejas  se  arrojan,  y  lo  demás  se  muele,  se  des- 
líe lo  machacado  en  el  caldo  del  puchero,  se  cuela  por  un 
cedazo,  se  sazona  lo  colado  con  sal,  pimienta  en  grano  y  un 


884 

pooo  de  agrai;  en  esta  sala»  se  calientan  las  tórtolas  ain  de- 
jarlas cocer,  y  te  turen  oon  oortosas  de  pan  frita*. 

700.  Tórtola*. — Se  destripan  y  te  lavan:  *e  frie  jitomate 
pioado,  ajo  y  cebolla;  ya  que  está  á  medio  freír  ee  echan  allí 
lea  tortolea  á  que  ae  sancochen  también  y  ee  echa  nn  poco 
de  pan  dorado  en  manteca»  clavo,  canela  y  pimienta  en  po- 
ca oantidad,  todo  molido,  tomillo,  laurel  y  mejorana;  ae  echa 
el  agua  suficiente  pasa  que  ae  euesa  y  ya  que  catán  ooeidaa 
y  quedan  de  un  eapeao  regular  ae  lea  revuelven  chícharos 
cocidos  para  servirles. 

761.  Paloma*  tortazo* — Desplumadas,  limpias  y  quitado 
el  vientre,  ae  sofríen  en  una  cazuela  oon  manteca  y  sal;  á 
medio  sofreír  se  lea  echa  avellanas  tostadas  machacedle,  un 
poco  de  sumo  de  limón,  un  polvo  de  pimienta,  desleído  to- 
do cato  con  dos  tases  de  caldo  del  puchero;  es  deja  al  fuego 
para  que  acaben  de  freirse  y  tomen  el  guato  del  machacado. 

762.  Quitado  d*  chot (os.— Se  pone  á  hervir  un  poco  de 
agua  y  bastante  vinagre,  un  pooo  de  aceite,  sal,  clavo,  pi- 
mienta y  canela  todo  molido;  ae  deja  hervir  hasta  que  que- 
de solo  la  mantees;  cuando  se  está  friendo  se  le  echa  cebo- 
lla, ajo  y  perejil  picados,  y  se  le  afiade  pan  rallado  antee  de 


783.  Chitado  de  chorlo*. — Se  pica  mucha  cebolla,  perejil, 
un  pooo  de  ajo  y  bastante  pan  rallado,  sal  y  pimienta  moli- 
da. Todo  esto  se  mésela  y  ee  envuelven  en  ello. loa  chorlos, 
echándoles  tomillo  por  dentro.  Se  envuelven  loa  chorlos  en 
papelea  y  se  ponen  en  la  parrilla,  y  áfuegomanso  se Toltean 
para  que  te  asen. 

764.  Chorlo*  relleno*. — Se  abren  por  debajo  de  la  rabedi- 
Ua  ouando  estén  limpios  y  desplumados,  para  poder  sacar 


236 

loa  intestinos,  menudillds»  etc.  Todo  lo  extraído  te  pica  con 
un  poco  de  tocino,  perejil,  ajo,  sal  y  pimienta;  con  esta  ma- 
sa se  llenan  los  chorlos,  y  cubiertos  con  lonjas  de  tocino  del- 
gadas, se  asan  á  fuego  lento. 

765.  Chorlo*  asado*. — Extraídos  los  menudos,  se  pican, 
menos  la  molleja,  con  tocino,  sal,  pimienta,  perejil  7  ajo,  y 
con  esta  masa  se  rellenan  las  aves;  después  se  envuelven  en 
tocino  y  se  asan  rociándolas,  recibiendo  en  rebanadas  de  pan 
el  jugo  que  de  ellas  se  desprende;  sírvanse  sobre  estas  mis- 
mas rebanadas  con  una  salsa  picante. 

766.  Codornices  *n  chícharo*.—  Hágase  cocer  en  una  ca- 
cerola con  una  rebanada  de  ternera  y  otra' de  jamón,  zana- 
horias, cebolla  y  un  ramito  de  yerbas  aromáticas;  cúbran- 
se en  seguida  con  lonjas  de  tocino  y  papel  engrasado,  pón- 
gase fuego  por  encima  y  debajo,  y  después  de  quitado  el 
caldo  se  echan  chícharos  cocidos  con  jamón. 

767.  Codornices  asada*. — Se  las  dará  una  vuelta  en  el  asa- 
dor primero.  Téngase  preparada  una  cazuela  al  fuego  con 
manteca,  en  la  que  se  echará  sal,  un  poco  de  pan  rallado, 
un  poco  de  pimienta  y  por  cada  dos  codornices  una  yema  de 
huevo;  se  las  da  de  este  batido  con  unas  plumas,  y  se  revuel- 
ven hasta  que  estén  doradas. 

768.  Tordo*  d  la  inglesa.— Después  de  limpios  se  untan 
los  tordos  cubriéndolos  con  papel,  y  se  ponen  á  asar  luego 
que  estén  tiernos;  se  les  unta  con  manteca  para  que  se  do- 
ren, echándoles  una  miga:  de  pan  y  sal  molida,  sirviéndo- 
los con  salsa  picante. 

769.  Tordos  en  escabeche. — Quítenseles  la  cabeza  y  las  pa- 
tas^Ee  les  pondrá  en  las  parrillas  ó*  asador  para  medio  tos- 

En  esta  forma  se  ponen  en  vinagre  con  hojas  de  lau- 


336 

ni,  y  bastantes  especias.  Póngante  después  en  una  vasija, 
echándoles  salmuera  caliente  y  cubriéndolos  oon  una  cape 
de  grasa.  Ciérrele  la  Tasijs  oon  una  vejiga  d  pergamino,  y 
ee  pondrán  en  un  sitio  freeoo.  De  este  modo  se  eonaervmn 
mes  de  un  ano. 

770.  QuUado  dtptrdiou. — Bien  limpias  y  lavadas  ka  per» 
dioes  se  ponen  á  dorar  en  la  parrilla  por  uno  y  otro  lado; 
cuando  lo  están  ee  echan  en  una  olla  oon  aceite,  doa  cábe- 
se* de  ajo  enteras,  bastante  perejil  picado,  seis  clavos  ente- 
ros, seis  pimientas  enteras  y  sumo  de  naranja  agria,  según 
la  cantidad  que  sea,  de  modo  que  quede  temi-egrio,  una 
rebanada  de.  jambn  y  se  pone  á  la  lumbre  par*  que  se  fría» 
Así  que  el  perejil  está  frito  se  le  echa  agua  caliente  nanees 
ría  para  que  se  eneas:  á  medio  cocer  se  le  echa  harina  para 
que  espese,  meneándolo  para  que  no  haga  bolas  y  se  sirve 
espeso. 

771.  (toteado  de  perdm  ó  gallina  ds/Qumm. — Aceite  y  vi- 
nagre en  igual  cantidad,  dos  cebollas  enteras,  une  cabes» 
de  ajo,  cuatro  granos  de  pimienta,  enteros.  Se  pone  en  una 
olla,  tapándola  oon  un  papel  y  encima  una  tas*  oon  agua,  y 
se  menea  de  cuando  en  cuando  con  la  misma  olla»  s 

772.  Boyan»  ó  codornices. — Después  de  limpias  y  desven- 
tradas,  se  sobreasan  en  unas  parrillas  á  muy  poco  fuego  y 
por  un  pequeño  rato;  échese  en  una  camela  con  manteca 
y  sal;  fríense;  seseosa,  en  el  caldo  que  dejaron  se  frien 
seis  ajos,  cebollas,  perejil,  iodo  picado;  échese  un  vaso  de 
vino  seco  y  especias  finas;  se  echan  las  oodornioss,  y  sejes 
deja  rehogar  y  hervir  á  fuego  lento  como  media,  hora.  -  Se 
sirven  después. 

773.  Petábala  catalana. — Limpia  ya  la  perdis,  se  hace 


287 

rehogar  en  una  cazuela  con  mantee»;  te  sao»  la  perdis  y  á 
la  misma  manteca  en  que  se  frió  se  le  echa  caldo,  sal,  pi- 
mienta y  todas  yerbas,  y  se  deja  hervir  de  nueva.  Se  echa 
la  perdis  y  se  pone  á  cocer,  mientras  se  fríen  aparte  dos 
panados  de  ajos,  y  en  otra  cazuelita  un»  naranja  agria  cor- 
tada en  ruedas.  Un  cuarto  de  hora  antes  de  servirse  se  mez- 
cla todo  para  qne  acabe  de  cocerse. 

774.  Perdices  en  awdor.— Después  de  desplumadas,  va- 
ciadas y  arregladas,  cúbrase  su  pecho  con  rodajitas  de  li- 
món, sin  cortesa  ni  pepitas,  y  después  con  lonjas  de  tocino» 
envuélvanse  en  papel  engrasado  y  pónganse  en  el  asador. 
8e  sirve  con  jugo  claro  ó  sumo  de  limón  ó  naranja. 

776.  Perdices  rtüenae  asadas. — Hágase  un  relleno  con  su 
hígado,  tocino  raspado,  sal,  perejil  y  cebollas  picadas,  má- 
tase este  relleno  en  el  cuerpo  y  cuezase;  en  seguido  ss  vuel- 
ven las  patas  sobre  el  pecho,  se  rehogan  en  la  cacerola  con 
manteca,  y  después  se  ponen  á  asar  en  el  asador.  Se  sirven 
con  la  misma  salsa  que  las  precedentes. 

776.  Perdices  en  parrilla. — Pártanse  en  dos  pedazos  por 
los  ríñones,  aplástense  después  de  asadas  y  ya  fritas,  rehó* 
guense  en  la  cacerola  con  un  poco  dé  manteca  y  buen  aazo- 
namiento,  cuidando  de  volverlas  por  los  dos  lados;  póngan- 
se después  sobre  la  parrilla,  engrásense  y  póngaseles  para 
servirlas  una  salsa' á  la  pebre  ó  de  naranja.- 

777.  Picado  de  perdices — Después  de  quitadas  las  mem- 
branas y  tendones,  y  de  haberlas  untado,  se  asan;  luego  se 
pica  su  carne  muy  menudamente,  se  hacen  rehogar  en  una 
cacerola  con  manteca,  chiles,  perejil  y  ajos,  y  se  afiade  un» 
cucharada  de  harina.  Guando  todo  está  bien  mezclado  se  le 
echa  caldo  y  vino  blanco,  se  pone  en  esta  salsa  el  picadillo, 


y  se  hace  oooer  sin  que  hierva.  Se  eirve  coa  rebanad»  de 
pan  tostado. 

778*  Perdices  día  infle**.— Se  abren,  ka  perdióse  desde 
la  rabadilla  haata  el  buche,  después  de  despumadas,  dea* 

con  un  macheterse  echan  en  un  adobo  de  aceite  peana  po- 
nerla! en  parrillaa  á  nn  fuego  viro,  y  ae  sirven,  con  una  sel* 
aa  de  pimienta  A  otra  cualquiera. 

770.  Salmorqo  dé  perdices.— Se  oortan  loa  miembros  de 
perdicea  aaadaa  y  fríes,  ae  lea  quita  el  pellejo  y  oalientenae 
lentamente  en  el  caldo  de  auataneiaa  6  del  puchero.  Mien- 
tra! tanto  ae  baca  hervir  aparte  Tino  con  ajoa  verdea  pice- 
doa,  oortexaa  de  limón  y  un  pooo  de  española,  dejándolo 
menguar  la  mitad;  coloqúense  en  el  platón  loa  miembroa  de 
laa  perdicea  llenando  loa  huecos  con  oorteaaa  de  pan  fritea, 
y  riégúese  el  todo  con  la  salsa  dicha» 

780.  Perdices  con  criadilla* — Se  oortan  en  peda  ene  grue- 
sos laa  criadillas,  se  pasan  por  manteca  con  chiles,  y  espe- 
cias, mezclando  carne  picada  y  machacada  de  alguna  ave; 
rellenando  con  este  picado  laa  perdicea,  se  cuecen  y  ae  lea 
añade  una  salea  de  criadillas.    . 

781.  Codornices  y  perdices  asadas, — Deapuea  de  limpiaa 
ae  laa  da  una  vuelta  en  el  asador.  •  Se  tendrá  una  camela 
al  fuego  con  manteca,  en  la  que  ae  echará  sal,  un  poco  de 
pan  rallado,  un  polvo  de  pimienta  y  una  yema  de  huevo  por 
cada  dos  codornicea,  ae  lea  va  dando  con  este  batido .  con 
una  pluma,  revolviéndolas  hasta  que  están  bien  doradas. 
Del  mismo  modo  se  preparan  las  perdices.    . 

783.  Perdices  asadas  con  sardinas. — Después  de  limpiaa 
se  lea  mete  dentro  del  cuerpo  doa  sardinas  bien  limpiaa 


239 

sin  cabeza;  se  asan  con  manteca  ¿tocino,  y  ai  hubiese  jito* 
matea  ae  echan  por  enoima  6  zumo  de  limón,  un  polvo  de 
pimienta,  aal  y  perejil;  ae  asan  entre  doa  fuegos,  y  al  tiem- 
po de  servirlas  se  las  quita  las  sardinas. 

788b  Perdices  en  salía. — Bien  limpias  y  untadas  de  man* 
teca  se  sobreasan  en  parrillas;  luego  ae  ponen  en  una  cague* 
la  con  perejil,  pimienta,  sal,  aceite  crudo,  hojas  de  laurel, 
unas  ruedas  de  limón  6  naranja,  ajos  machacados  y  caldo 
que  las  cubra;  cuando  estuvieren  cocidas  se  apartan,  y  por 
cada  ave  se  pone  una  yema  de  huevo  batida. 

784.  Perdices  estofadas.  -—Después  de  limpias  se  sobreasan 
en  las  parrillas  y  se  acomodan  en  una  cazuela  con  perejil  y 
pimienta,  sal,  aceite  crudo,  hojas  de  laurel,  unas  ruedas  de 
limón  ó  naranja,  ajos  y  agua  6  vino  que  las  cubra.  Guando 
estén  cocidas  se  apartan  y  sirven. 

785.  Perdices  estofadas  á  la  española. — Desplumadas  y 
limpias,  se  rehogan  y  se  ponen  en  una  olla  proporcionada, 
con  jamón  frito  cortado  en  pedazos,  cebolla  picada  gruesa 
en  abundancia,  loa  ajos  machacados,  especias  de  toda  clase, 
manteca  y  vino  blanco.  Así  se  pone  á  óocer  á  fuego  lento, 
y  enoima  de  la  olla  una  cazolita  con  agua  sobre  un  napel 
de  estraza. 

786.  De  otro  modo. — Se  rehogan  en  una  olla  proporcio- 
nada con  aceite,  cebolla  picada  gruesa^  una  cabeza  tte  ajos 
entera  y  especias;  después  que  esté  bien  rehogada  se  le  aña- 
de vino  blanco,  ó  vinagre;  tápese  la  olla  con  un  papel  de  es- 
traza, y  pongaje. encima  una  cazuela  pequeña  llena  de  agua. 

787.  Perdices  jscafeecAatfa*. -^Después  de,  limpias*  se  fríen 
en  aceite;  á  medio  freir  se  echan. en  vinagre  con  •  hojas .  de 
laurel,  ajo  majado  y  especias;  pónganse  en  una  vacija  y  se 


S40 

le  ech*  salmuera  y  por  encime  aceite;  se  tapa  hemátiea- 
mente,  y  ae  coloca  en  sitio  fresco.   . 

788.  Quitado  de  perdices  y  codornices. — Se  fríe  tocino  en 
podases,  y  deapnea  aa  retiran  ¿atoe,  en  coya  anatanda  ae 
fríen  estas  área;  ae  pone  deapnea  en  un  puchero,  y  con  la 
uiiema  grata  fríaee  cebolla  y  perejil  machacado;  ¿oncee  un 
vaso  de  Tino  blanco  y  eapeoíaa  y  que  cueaa  á  fuego  lento, 
bien  tapada  la  boca  del  puchero. 

780.  Frito jU  pájaro*.— Se  pelan,  ae  oortan  las  pataa  y 
la  mitad  de  loa  alones  y  se  fríen  sin  abrirlos,  con  manteca , 
■al,  tomillo,  pimienta  y  perejil  picado. 

790.  .  Aves  fritas  en  adobo.— 8e  preparan  en  adobo  com- 
puesto con  vinagre,  caldo,  sal,  perejil,  oebollaa,  ajoa  ma- 
chacados y  laurel;  pónganse  los  trozos  de  un  are  deshuesa* 
da  y  cocida  del  día  antes,  y  se  tienen  en  adobo  dos  6  mas 
horas  sobre  oeniza  caliente;  se  sacan,  escurren  y  envuelven 
en  harina,  se  fríen  y  ae  sirven  con  perejil. 

79L  Croquetas  de  aves, — Se  quitan  loa  tendones  de  un  ave 
atada,  se  pican  menudos  con  miga  de  pan,  empapada  en  cre- 
ma y  yema  de  huevo;  cuando  está  bien  batido  y  aaaonado, 
ae  harán  unas  bolitas,  que  se  envuelven  en  miga  de  pan;  en 
aeguida  se  humedecen  en  huevo  batido  y  ae  vuelven  á  em- 
panar; ae  fríen  y  sirven  en  pirámides,  con  perejil  frito  de- 
bajo. 

79$.  Pepitoria  de  mtnudtüce  de  ose. — Con  loa  alones,  mo- 
llejas, crestas,  pescuezos  4  higadillos  de  las  aves  se  hace  una 
pepitórk,  fríendolas  en  manteca  con  cebolla  y  jitomates;  des- 
pués se  machacan  ajos,  pimienta,  sal,  clavillo,  canela  y  pe- 
rejil; cuando  estén  oooidos  y  menguada  la  salsa,  te  echa  la 


237 

0 

m 

enlute  pángase  un  pocilio  de  agua  cociendo;  hágatele  cocer 
a  fuego  fuerte,  y  añádase  á  este  chocolate  una  buena  leche 
sin  dejarla  cocer.  Es  inútil  menearlo  nías  de  dos  ó*  tres  ve- 
ces durante  su  cocción;  los  chocolates  que  contienen  harina 
y  mucha  azúcar  son  malos  y  pesados. 

2.036.  Té. — Se  hace  cocer  el  agua  y  después  de  haber 
hervido  dos  minutos  se  saca  con  la  cafetera  á  la  mesa  y  allí 
se  echa  el  té  en  infusión  y  á  los  tres  minutos  se  pasa  á  la 
taza,  donde  se  endulza;  asf  no  pierde  sus  propiedades  ni  el 
aroma. 

2.037.  Helado*.  — Se  -componen  estos  del  zumo  de  vegeta-  ' 
les  y  frutas:  para  hacerlos  se  vierto  la  composición  que  se 
quiere  helar  en  las  garapiñeras  de  estaño,  rodeándolas  de 
hielo  machacado  mezclado  con  sal;  la  garapiñera  st  coloca 
dentro  de  un  cubo;  y  entre  é*ste  y  ella  se  pone  el  hielo;  de- 
be menearse  hasta  que  se  congele,  y  después  con  una  espá- 
tula de  madera  ae  menea  bien  el  líquido  de  cuando  en  cuan- 
do para  quitarle  que  se  adhiera. 

2.038.  Helado  de  gírala.— Viértase  en  la  garapiñera  mi- 
tad de  jarabe  de  guinda  y  mitad  de  agua,  mézclese  y  re- 
muévase continuamente. 

2.039.  Helado  de  vainilla. — Macháquese  medio  adarme 
de  vainilla  y  ocho  onzas  de  azúcar;  cuezanse  en  un  cuarti- 
llo de  leche,  cuélese  por  el  tamiz  y  hiélese. 

2.040.  Limonada. — Se  deshace  media  libra  de  azúcar  en 
dos  cuartillo*  de  agua,  y  se  exprime  en  ella  el  zumo  de  cua- 
tro limones. 

Para  la  naranja  se  reemplaza  el. Union  con  naranja. 

Algunos  .cortan  los  limones,  6  naranja»  en  pedazos,  y  vier- 

LA  OOOnnULA   POBLANA. — TOM.    H — 16. 


288 

» 
ten  encima  agüe  hir riendo;  este  sistema  solo  debe  emplear* 

te  para  loe  enfermo*. 

2.041.  Helado  de  chabacano*  y  cZuratnon. — 8e  hacen  pe- 
dazo* y  exprímanse  bien,  ae  cuela  por  tamiz  de  cerda,  y 
mezclando  la  suficiente  cantidad  de  asacar,  te  deja  en  infu- 
sión tres  6  cuatro  horas,  cuélese  otra  vez  y  después  se  hiela. 

2.042.  Helado  de  crema  de  vainilla.  — Pónganse  en  un  cazo 
seis  yemas  de  hueros,  tres  cuarterones  de  asacar  y  un  pe* 
daso  de  rainiUa,  se  bate  todo  bien;  después  se  pone  al  fue- 
go con  dos  ouartillos  y  medio  de  crema,  y  se  menea  mucho 

" hasta  que  esta  se  adhiera  á  la  cuchara,  sin  dejarla  hervir; 
se  enfria  y  hiela. 

2.043.  Leche  helada. — Cuezanse  cuatro  cuartillos  de  leche 
fresca  con  dos  yemas  batidas,  se  cuece  nn  poco  de  canela  y 
se  deslíe  en  una  libra  de  azúcar  blanca,  menéese  sin  descan- 
so hasta  que  se  espese  y  hierra,  pásese  por  tamiz  y  se  echa 
en  la  garapiñera. 

Los  helados  de  las  demás  frutas  se  componen  del  mismo 
modo,  mezclando  sus  jugos  con  el  agua  y  el  azúcar;  Ta  can- 
tidad debe  graduarse  en  media  libra  por  cuartillo  y  medio 
de  líquido;  éste  debe  estar  espeso  para  que  se  hiele  bien. 

2.044.  Sorbetes. — Los  sorbetes,  compuestos  también  de 
las  frutas  ó*  esencias,  deben  estar  menos  azucarado*  y  con- 
tener una  quinta  parte  de  licor  alooholico.  Es  necesario  em- 
plear menos  salitre  y  trabajarlos  mas  y  mas  prontamente, 
sin  lo  cual  la  falta  del  azúcar  les  haría  convertirme  en  tím- 
panos. Se  sirven  de  diferentes  formas,  ya  en  vasitos  figu- 
rando pirámides,  6  valiéndose  de  moldes  para  darles  la  fi- 
gura de  frutas,  peces,  quesos,  etc. 

2,046.    Sorbete  dé  chabacano*. — Se  eecojen  treinta 


289 

• 

maduros  y  .se  les  quita  el  hueso,  y  después  de  cortarlos  en 
pedazos,  se  pone  en  un  cazo  A  la  lumbre  con  nn  cnartillo  de 
agua:  Se  les  dn  nn  hervor  y  se  pasan  por  tamiz,  haciendo 
pasar  toda  la  pulpa,  A  la  cual  se  reúne  media  íihra  de  azúcar, 
que  se  habí***  desleído  en  agua  al  fuego,  y  después  de  incor- 
porarlo hien  se  deja  enfriar  y  se  pone  A  helar. 

Si  se  quiere  imitar  la  fruta  en  moldes  4  propósito,  se  les 
puede  poner  enmedio  de  •  cada  uno  una  almendra  y  se  pin- 
ten con  un  pinrelito  con  amarillo  y  carmín. 

2.046.  Sorbete  de  durazno. — Re  hace  del  mismo  modo  que 
el  anterior,  anadiándole  un  poco  mas  de  azúcar. 

2.047.  Rorhete  de  granada. Se  encojen  doce  granadas  que 
tengan  los  granos  mnv  encarnados  y  se  mezclan  en  un  mor- 
tero de  piedra,  añadiendo  cuatro  onzas  de  zumo  de  grose- 
lla y  veipte  de  azúcar.  Cuando  este*  todo  hien  machacado 
y  mez  lado  se  echa  una  azumhre  de  agua,  sin  dejar  de  me- 
nearlo: se  pasa  por  un  lienzo,  exprimiendo  con  fuerza  y  se 
pone  á  helar. 

2.048.  Rarhete.  de  flor  de.  ^varanja.  —Se  toman  ocho  onzas 
de  flor  de  naranja  y  doce  de  azúcar,  que  se  deslíe  con  ocho 
cuartillos  de  agua;  después  se  echa  hirviendo  sobre  las  flo- 
res de  naranja  puestas  en  una  vasija,  se  tapan  hien  y  se  de- 
jan así  en  infusión  por  espacio  dé  seis  horas;  se  pasa  por  un 
tamiz  v  se  hiela. 

2.049.  Sorbete  de  fresa. — Se  esoojen  bien  maduras  y  se  lea 
extrae  el  jugo  pasándolas  con  presión  por  un  lienzo  fino:  á 
una  libra  de  fosa  se  le  une  media  de  grosella  y  el  jugo  de 

dos  limones  con  una  libra  de  azúcar,  echando  medio  cuarti- 

» 

lio  de  agua;  se  procura  disolverlo  bien  y  se  hiela. 
2,060.  Sorbete  de  crema. — Diez  yemas  de  huevo,  dos  ouar- 


340 

tillo*,  de  lecha  y  media  libra  de  antear  retinada  ae  mezclan 
perfectamente  y  te  ponen  á  fuegu  lento,  mezclándolo  ain 
deacanao  haata  que  tome  un  regalar  espesor»  ae  retira  en  se- 
guida, y  «1  cabo  de  un  corto  tiempo  ae  hiela;  también  ae  le 
puede  añadir  media  libra-  de  chocolate,  en  cuyo  caao  ae  cue- 
ce éste  con  agua  común  y  después  ae  mesóla. 

2,051.  XorbeU  de  capulín**. — Se  buscan  doa  libras,  aña- 
diendo un  poco  de  jugo  de  grosella  6  fresas,  medio  cuarti- 
llo de  agua  y  media  libra  de  asnear  haciendo  escurrir  el  ju- 
go de- los  capulines^  y  fresas  por  medio  de  un  lienzo  fino;  ae 
revuelve  todo  bien  y  ae  hiela. 

2.062.  Helada  de  licor, — Un  cuartillo  de  licor,  tres  de 
agua,  el  jugo  de  seis  limones,  cuatro  claras  de  huero  y  diez 
onsaa  de  acucar,  ae  paaa  por  tamiz  y  después  de  haberlo  de- 
jado un  poco  de  tiempo,  se  hiela  de  la  misma  forma  Tañan- 
do la»  sustancias;  las  demás  claaea  de  helados  ae  hacen  ad- 
viniendo, que  cuando  se  quieran  hacer  helados  en  que  in- 
tervengan la  leche  y  la  crema,  es  necesario  que  la  leche  sea 
siempre- del  día,  6  nata  formada  de  la  nuche  á  la  mañana, 
pues  sin  esta. precaución  se  pasaría  1»  leche.  La  de  raca  es 
la-mejor. 

2.063.  Biwoochae  helado*. — Son  de  una  composición  fácil 
y  delicada;  de  hnevos,  azúosr  y  perfumados  de  la  fragancia 
que  se  quiera;  y  en  Tes  de  helarse  en  sorbetera,  se  lesione 
á  helar  en  una  caja  de  hoja  de-lata  rodeada  de  hielo  salado; 
estas -cajas. son.  cuadradas  con  un  borde  de  dos  pulgadas  de 
sitara,  para  poner  el  hielo;  varia  su  tamaño  según  el  núme- 
ro de  bizcocho*  que  ha  de-  halacse,  teniendo  en  su  centro 
fondos  movibles  de  hoja  de  lata  para  colocar  los  bizcochos; 
se  ponen  sobes  cada  fondo  lasrcajitas  próximas  unasráaotnis; 


241 

se  pone  después  esta  caja  en  otra  mayor  lleta  de  hielo,  y  á 
las  dos  horas  debe  estar  helado.  La  «vmpesteton  poede-eer 
la  siguiente; 

Bizcochos Veinticinco, 

Yemas  de  huevo.  Seis. 

Almíbar Copa  y  media. 

Agua. Tres  parees  de  cepa. 

Leche Un  cuartilla 

Vainilla Una  parte  de  copa. 

3,064.  Ponche.—  Tómese  un  limón  y  rettréguese  su  cas- 
cara contra  un  pedazo  de  asacar  de  pilón  del  peso  de  media 
libra;  después  se  echa  sobre  el  azúcar  impregnado  un  poco 
de  aceite  esencial  de  limón  y  cerca  de  medio  cuartillo  de 
una  infusión  fuerte  de  té  verde  con  -una  cantidad  proporaio- 
nada  de  jarabe  de  culantrillo;  se  exprime  el  sumo  de  dos 
limones,  quitándoles  antes  las  pepitas,  y  se  echan  sobre  to- 
do dos  cuartillos  de  aguardiente  ó  rom  superior,  se  le  da 
fuego,  se  agita  la  llama  con  el  cacillo  del  ponche,  y  cuando 
el  limón  se  haya  reducido  á  dos  terceras  partes  se  apaga  la 
llama  soplándola,  y  se  sirve  el  ponohe  caliente  en  vasos. 

£1  ponche  de  vino  tinto  ó  blanco  se  hace  del  mismo  mo- 
do, á  excepción  de  que  no  se  quema,  pero  se  sirve  caliente. 

El  ponche  de  huevos  se  hace  echando  en  un  vaso  de  .pon- 
che uno  de  jarabe  de  ponche  y  la  yema  de  un  huevo;  se  ba- 
te todo  junto  con  una  oaehara,  y  se  llena  después  el  vaso 
de  agua  hirviendo,  revolviéndolo  un  poco;  es  excelente  en 
el  invierno. 

2,055.    Ponche .  de  leche. — En  un  cuartilb  de  leche  se  Hs- 


242 

tan  dos  yema*  de  huevo,  y  después  de  bien  batida»  se  echau 
en  la  ponchera,  mezclándolo  con  un  cuarterón  de  asacar, 
anadiando  un  poco  de  leche  hirviendo,  meneándolo  bien  con 
un  cucharon ,  y  se  pone  un  poco  de  rom;  también  se  suele 
echar  nuez  moscada  en  polvo. 

2,066.  Ponche  de  hueco», — Tóuieuse  una  docena  de  hue- 
ros, se  baten  bien,  mezclándolos  después  con  azocar  fina, 
agua,  meneándolo  mucho;  se  pone  á  hervir  un  momento  y 
se  le  echa  un  poco  de  rom. 

2,057.  Funche  de  té.— Se  hace  la  infusión  de  té  y  se  le 
mezcla  ralladura  de  limón  y  azocar  al  gusto;  se  echa  el  licor 
y  se  prende.  8a  sirve  caliente.  £1  licor  puede  ser  coñac  ó 
champaña. 


COMPOSICIÓN  DE  LICORES. 

Loe  licores  se  preparan  con  aguardiente  6  espíritu  de  vi- 
no, azocar  y  el  aroma  ó  zumo  extraído  de  ciertas  sustancias. 
Justas  composiciones,  que  se  sacan  por  destilación  ó  por  in- 
fusión, se  usan  interiormente  y  deben  agradar  á  la  vista  y 
tenar  buen  olor  y  sabor.  Deben  componerse  con  ingredien- 
te* eeoojidos  cuidadosamente,  teniendo  presente  que  la  cali- 
dad de  los  licores  depende  muchas  veces  del  agua,  y  por  lo 
mismo  debe  emplearse  la  de  fuente,  pura  y  sin  sabor  extraño. 

Las  ratafias  son  licores  preparados  por  infusión,  para  cu- 
ya composición  se  «acá  la  fragancia,  la  cualidad  y  el  color 
dé  cualquiera  fruta,  exprimieqdo  el  zumo  de  ella  en  el  aguar- 
diente, que  la  disuelve  y  se  carga  de  todos  sus  principios. 

2,968».    Curazao  á  licor  de  edecaras  de  naranja. — Déjense 


243 

macerar  al  sol  por  espacio  de  quince  días,  en  una  botella  bien 
tapada  d««  onzas  de  cascaras  secas  de  naranja  con  dos  cuar- 
tillos de  aguardiente  común,  teniendo  cuidado  de  menear 
la  botella  todos  los  dias.  Pasado  dicho  tiempo,  póngase  al 
fuego  y  disuélvase  una  libra  de  azúcar  en  igual  cantidad  de 
agua,  dejándolo  que  se  haga  caramelo,  y  después  se  echará 
en  el  aguardiente  saturado  de  eseucia  de  cascaras  de  naranja. 

2  069.  De  cuatro  flore*. — Seis  cuartillos  de  aguardiente 
bueno,  cuatro  de  agua,  cuatro  onzas  de  espíritu  de  rosas, 
cuatro  de  espíritu  de  flor  de  naranja,  onza  y  media  de  espí- 
ritu de  jazmín,  una  de  espíritu  de  reseda  y  dos  libras  y  media 
de  azúcar  superior.  Ratifiqúese  el  aguardiente  en  el  baño 
de  María,  y  eu  todo  lo  demás  se  procede  como  en  el  licor 
anterior. 

2,060. .  Anisete  de  Bardeo*. — Aguardiente,  ocho  cuartillos; 
anís  verde,  tres  onzas;  anís  seco,  dos  onzas;  culantro,  media 
onza;  hinojo,  inedia  onza;  agua,  cuatro  cuartillos  y  azúcar 
tres  libras.  Después  de  quebrantadas  las  semillas,  se  echan 
con  el  Aguardieute  sobre  el  baño  de  María  para  sacar  sobre 
cuatro  cuartillos  de  licor;  no  debe  dejarse  pasar  la  flama. 
El  azúcar  se  deslíe  en  el  agua,  se  forma  la  mezcla  y  se  filtra 
y  embotella  como  los 'anteriores. 

2,061.  Noyó, — Aguardiente,  oche  cuartillos;  almendras 
de  chabacanos,  media  libra;  almendras  de  duraznos  y  de 
guindas  agrias,  cuatro  onzas;  agua,  cuatro  cuartillos;  agua 
de  flor  de  naranja  cuatro  onzas,  y  azúcar  quebrantada  dos 
libras  y  media.  Se  ponen  las  almendras  en  el  agua  por  vein- 
ticuatro horas  para  que  afloje  la  piel;  se  pelan,  se  quebran- 
tan y  se  ponen  en  infusión  en  el  aguardiente  por  quince  dias, 
y  después  se  procede  á  la  destilación.  Guando  se  ha  desleí- 


M4 

do  perfectamente  el  asacar  eii  el  agua  destilada  te  añade  fat 
tíur  de  naranja,  te  forma  la  mésela  y  ae  filtra, 

2,0o2.  Perfecto  amor. — Seie  cuartillo*  de  aguardiente,  una 
ouza  ue  cascaras  de  toronja,  dos  de  cascaras  de  limón,  me* 
di*  dracina  de  clavillo,  tres  cuartillos  de  agua  destilada,  acti- 
var quebrantada  dos  libras  y  media.  Se  ponen  los  primero» 
iugredieotes  á  destilar  para  anear  cuatro  cuartillos  de  licor; 
se  dealie  el  azúcar  en  el  agua,  poniéndola  á  la  lumbre,  y 
luego  ijue  está  fría  se  baos  la  mesóla.  Se  une  con  la  cochi- 
nilla y  se  filtra. 

2,0d&  De  apio.  —Cuatro  cuartillos  de  aguardiente,  media 
onza  de  simiente  de  apio,  dos  cuartillos  de  agua  y  libra  y 
cuarterón  de  asnear.  8e  destila  el  aguardiente  con  la  sumen* 
te  de  apio,  y  se  saoau  dos  cuartillos  de  licor;  se  deslíe  el  asa- 
car en  el  agua,  se  forma  la  mesóla  y  se  filtra. 

Todos  los  licores  de  simiente-ce  naces  de  este-  modo,  guar- 
dando las  mismas  proporciones. 

2.064.  Pectoral.— Seis  cuartillos  de  aguardiente,  cascaras 
de  cuatro  naranjas  agrias,  canela  fina  quebrantada,  duerna 
y  media;  cascara  de  núes  moscada,  una  draoma;  agua  desti- 
liida*  cuatro  cuartillos*  asacar,  dos  libras.  Se  ponen  en  in- 
fusión en  el  aguardiente  las  cascaras  de  naranja-  la  canela 
y  ¿a  núes  por  espacio  de  ocho  días  y  se  filtra  después  para 
sacar  unos  cuatro  cuartillo»  de  licor;  se  deslíe  el  asnear  en 
el  agua,  se  forma  la  mesóla  y  se  filtra. 

2.065.  Crema  de  ajenjo, — Tómense  ocho  cuartillos  de 
aguardiente,  media  libra  de  cogollos  de  ajenjos  frescos,  cas- 
caras de  limones  6  naranjas,  cuatro  cuartillos  de  agua  y  tres 
libras  de  azocar.  Se  destila  el  aguardiente  con  el  ajenjo  y 
las  ciscaras  para  sacar  cuatro  cuartillos  de  licor;  se  deslíe  el  ■ 


245 

azúcar  en  ei  agua  puesta  á  la  lumbre,  y  cuando  está  ya  á 
punto  de  cocer  se  forma  la  mezcla,  se  filtra  y  se  guarda  en 
botellas. 

Los  licores  que  llaman  cremas  han  de  ser  mas  crasos  que 
los  anteriores,  porque  se  les  echa  mas  azúcar,  la  cual  se  po- 
ne á  calentar  hasta  que  vaya  á  cocer.  Los  que  llaman  acei- 
tes deben  tener  una  consistencia  parecida  á  la  del  aceite  de 
oliva,  cuya  propiedad  se  logra  del  mismo  modo. 

2,006.  De  laurtL  —Ocho  cuartillos  de  aguardieute.  hojas 
y  flores  de  mirto,  seis  onzas;  hojas  de  laurel,  seis  onzas;  nie- 
día  nuez  moscada  quebrantada;  clavillo,  media  dracmayagua 
destilada,  cuatro  cuartillos  y  azúcar  quebrantada,  tres  li- 
bra*; mézclase  y  fíltrese. 

2,0(37.  Dó  ro«u. — Aguardiente,  cuatro  cuartillos;  hojas 
de  rosas  escojidas,  tres  libras;  agua  destilada  cuartillo  y 
medio;  agua  doble  de  rosas,  media  libra;  azúcar,  doce  onzas. 
Se  destilan  las  hojas  de  rosa  en  el  aguardiente  para  sacar 
cuatro  cuartillos  de  licor,  se  deslié  el  azúcar  en  frió  en  el 
agua  de  rosas,  se  forma  la  mezcla,  se  tifie  con  la  'cochinilla 
y  se  filtra  el  licor. 

2.068.  De  menta* — Ocho  cuartillos  de  aguardiente;  men- 
ta reciente,  doce  onzas;  cascaras  de  tres  limones;  agua  des- 
tilada cuatro  cuartillos;  esencia  dementa  pura,  una  dracma; 
azúcar,  tres  libras.  Lo  menta  se  destila  con  el  aguardiente 
y  las  cascaras,  para  sacar  sobre  cuatro  cuartillos  de  licor,  en 
el  que  se  disuelve  la  esencia  de  menta.  Se  deslíe  el  azjicar 
con  el  agua  á  la  lumbre,  se  deja  enfriar,  se  hace  la  mezcla 
y  se  filtra. 

2.069.  Duraznos  en  aguardiente. — Se  escojen  veinte  du- 
raznos sauos  y  que  estén  muy  cerca  de  ser  maduro*,  se  les 


246 

quita  la  pelusilla  oon  un  lienzo  y  se  pican  por  iodo*  Jados 
hasta  el  hueso  oon  un  alfiler  gordo.  Se  deslíen  dos  libras  de 
azúcar  en  suficiente  cantidad  de  agua,  poniéndola  á  cocer 
hasta  que  adquiera  la  consistencia  del  almíbar,  y  entonces 
se  echan  los  duraznos;  y  revolviéndolos  continuamente,  se 
dejan  cocer  hasta  que  ablanden  un  poco  y  cedan  á  la  pre- 
sión de  los  dedos.  Se  sacan  y  oolooan  en  frascos;  se  aparta 
el  almíbar;  luego  que  esté  frío  se  echan  las  dos  terceras  par- 
tes de  su  peso  de  aguardiente  de  veinticinco  grados.  Se  me- 
nea bien  la  mezcla  y  se  pasa  por  un  filtro,  se  echa  este  licor 
en  los  frascos  de  los  duraznos  hasta  cubrirlos,  se  tapa  con 
uu  corcho,  y  encima  un  pergamino  mojado,  que  se  ata  bien 
al  rededor. 

2.070.  Otro*  dui  cuno*  en  aguardtcnU.  — A  la  agua  caliente 
se  le  echa  un.puño  de  ceniza  y  se  le  echan  los  duraznos,  te- 
niendo cuidado  que  no  hiervan  mucho,  sino  solo  lo  suficien- 
te para  quitarles  el  pellejito,  y  luego  se  lavan  y  se  hacen  en 
conserva  muy  aguada  y  luego  que  estén  se  ponen  en  un  tar- 
ro, y  se  les  pone  mitad  de  almíbar  y  mitad  de  aguardiente 
catalán  y  al  mes  ya  están  buenos. 

2.071.  Ghiindaá  en  aguardiente — Se  escojen  guindas  gor- 
das de  las*  mejores,  que  sean  frescas  y  sanas.  Se  les  corta  la 
mitad  del  palo  y  se  echan  en  agua  fría,  de  la  cual  se  sacan, 
y  echan  en  frascos  llenos  de  aguardiente  de  buena  calidad. 
En  cada  frasco  se  pone  una  muñeca  de  lienzo  con  canda 
quebrantada  y  media  6  una  docena  de  clavillos  de  especia. 
Se  tapan  los  frascos  con  un  corcho  y  un  pergamino,  y  se  de» 
jan  así  por  espacio  de  un  roes.  Al  cabo  de  este  tiempo  se 
apartan  las  guindas  del  aguardiente,  el  cual  se  mide,  y  á  ca- 
da cuartillo  se  le  echan  de  cinco  á  seis  onzas  de  azocar,  que 


24? 

se  -deslíe  perfectamente.  Se  pasa  después  por  un  filtro,  se 
echa  en  los  f rasóos  de  las  guindas  y  se  tapa  bien.  Al  cabo 
de  dos  meses  se  pueden  ya  comer.  Del  mismo  modo  se  pre- 
paran las  otras  frutas,  etc. ,  ote.  Las  raíces  que  tienen  el  sa- 
bor muy  azucarado  se  meten  simplemente  en  el  aguardiente. 
Para  conservar  en  aguardiente  las  frutas  del  almíbar,  se 
sacan  y  escurren,  y  después  de  haberlas  colocado  en  frascos, 
se  echa  encima  aguardiente  de  veintidós  grados,  el  cual  pe- 
netra en  los  poros  de  las  frutas  y  se  incorpora  con  el  azúcar. 
De  este  modo  se  forma  un  compuesto  muy  agradable,  y  las 
frutas  conservadas  en  él  pueden  comerse  al  cabo  de  tres  6 
cuatro  meses. 

2.072.  Aninete. — Se  pondrán  en  infusión  en  seis  cuarti- 
llos de  aguardiente  un  cuarterón  de  anís  verde,  la  cascara 
de  un  limón  y  un  poco  de  canela;  déjense  en  esta  infusión 
un  mes;  cuélese,  añádanse  tres  cuartillos  de  agua  y  libra  y 
inedia  de  azúcar  clarificada;  fíltrese  y  póngase  en  botellas. 

2.073.  Aceito  dé  rosa. — Póngase  en  infusión  un  cuarterón 
de  hojas  de  rosa,  dos  cuartillos  de  agua  tibia;  déjense  dos 
6  tres  dias;  al  cabo  de  este  tiempo  pásese  por  tamiz;  añá- 
danse én  seguida  dos  cuartillos  de  buen  aguardiente,  media 
libra  de  azúcar  clarificada,  canela,  corteza  de  nuez  moscada, 
culantro,  una  onza  de  todo;  déjese  al  menos  diez  dias  y 
fíltrese. 

2.074.  Agua  de  Seliz.  —Esta  agua  de  la  que  se  hace  un 
grande  uso  de  algunos  años  á  esta  parte,  facilita  la  digestión 
y  da  á  los  vinos  y  almíbares  un  gusto  muy  agradable. 

Llénese  una  botella  de  agua  hasta  el  cuello,  la  que  se  ta- 
pará con  un  tapón  que  cierre  herméticamente;  antes  se  echa- 
rá en  agua  una  dracma  de  ácido  tártrico  y  otra  de  bicarbo- 


248 


nato  de  ion;  tápese  «1  instante  de  echar  los  ingredientes  y 
átese  al  tapón  con  ana  cuerda.  Al  cuarto  de  hora  ya  se  pue- 
de beber;  también  se  puede  beber  echándole  una  cucharada 
de  jarabe  de  grosella  ú  otro  cualquiera,  y  entonces  toma  un 
gusto  parecido  al  vino  de  Champagne. 


VINOS  OA  FRUTAS. . 

Tuda  fruta  cuya  pulpa  contenga  materia  sacarina  es  sus* 
ceptible  de  producir  vino,  y  lo  será  tanto  maa cuanta  mayor 
sea  la  cantidad  de  azúcar.  Por  esta  razón,  cuando  e|  jugo 
es  acídulo  y  flemoso,  se  necesita  promover  la  fermentación 
vinosa  añadiendo  azúcar  en  cantidad  conveniente  y  propor- 
cionada á  la  abundancia  de  ácido» 

No  nos  es  posible  fijar  de  una  manera  absoluta,  ni  aun 
para  una  fruta  determinada,  si  debe  6  no  añadirse  asacar  al 
jugo,  y  en  qué  proporción.  El  terreno  donde  se  crió,  la  ma- 
yor ó  menor  intensidad  del  calor  en  la  época  de  sn  florescen- 
cia, crecimiento  y  madurez,  y  la  abundancia  ó  ausencia  to- 
tal de  lluvias  en  todos  ó  en  cualquiera  de  esos  tres  períodos, 
conthbuyeu  al  aumento  6  diminución  de  la  materia  sacari- 
na, ó  al  mayor  ó  menor  desarrollo  de  la  acidula  y  flemosa. 

La  observación,  el  estudio  de  la  fruta,  la  apreciación  de 
las  antedichas  circunstancias,  en  cada,  clima,  en  cada  ano  y 
en  cada  localidad,  pueden  solas  dar  á  conocer  los  casos  y 
cantidades  en  que  sea  necesario  este  aumento  de  azúcar. 
Nos  limitaremos,  pues,  á  dar  un  punto  de  comparación  de 
donde  puedan  partir,  las  observaciones,  considerando  las 
frutas  de  un  modo  absoluto  y  sin  relación  con  las  influen- 


•  24*1 

cían  indicadas;  la*  suponemos  todas  en  el  grado  de  dulcura- 
cion  6  acidez  que  las  es  nías  general  comparándolas  entre 
sí,  y  con  relación  á  la  uva.  De  esta  base  partiremos  para 
establecer  la -cantidad  de  azúcar  que  haya  de  añadirse  á  las 
que  la  han  menester,  salvo  el  que  nuestros  lectores  la  au- 
menten 6  disminuyan  en  los  casos  y  circunstancias  enun- 
ciadas. 

Tampoco  son  numerosas  las  reglas  que  podemos  dar  para 
la  fabricación  én  general,  pues  cada  fruta  exige  modifica- 
ción por  la  naturaleza  misma  de  su  jugo.'  Que  esté  en  per- 
fecta madurez,  pero  exenta  de  golpes,  picaduras  6  amapu- 
llamentos:  y  que  la  fermentación  se  efectúe  completamen- 
te, es  lo  único  que  podemos  decir  de  ana  manera  absoluta: 
al  tratar  de  las  diferentes  clases,  indicaremos  lo  que  deba 
hacente. 

2,075.  Viiw  de  chabacano. — Quitada  la  pelusa  á  los  cha- 
bacanos, se  les  hace  trozos,  se  quitan  los  huesos  y  se  estri- 
ña la  pulpa  con  expresión  para  retirar  todo  el  jugo;  pónga- 
se ésta  en  nna  vasija  de  porcelana,  6  en  una  cuba  si  la  can- 
tidad es  grande,  cubriéndola  con  nn  lienzo  y  déjesela  repo- 
sar por  espacio  de  quince  dias  6  tres  semanas  que  durará  la 
fermentación.  Coando  ésta  ha  terminado,  el  líquido  tiene 
ana  película  en  la  superficie,  y  exhala  nn  olor  fuerte:  en- 
tonces se  separa  la  costra,,  se  decanta,  se  cuela  para  quitar 
tbda  partfcola  que  haya  podido  sublimarse  al  hacer  la  de- 
cantación, y  se  mezcla  con  nna  libra  de  espíritu  de  vino  y 
dos  de  azúcar  blanca  pulverizada,  por  cada  ocho  cuartillos 
de  zumo.  Luego  se  vuelve  á  colocar  en  otra  vasija  por  espa- 
cio de  quince  dias,  se  .filtra  y  se  embotella.  Un  mes  después-, 
está  en  estado  -de  poder  servir. 


2W 

2.076.  Vino  de  capidint*..— Estrilados  y  separados  los 
huesos,  se  dejan  fermentar  dorante  un  día;  luego  se'afiade 
nna  libra  de  asacar  por  cada  doce  ousrtillos  de  sumo,  y  te 
deja  fermentar  por  espacio  de  quince  días,  para  decantar  y 
embotellar. 

2.077.  Vino  de  cirrotas.  — Se  prepara  como  oí  de  capuli- 
nes, con  la  diferencia  de  que  para  hacer  mu*  rápido  el  des- 
prendimiento de  la  materia  sacarina,  debe  verterse  sobre  la 
pulpa  estripada  agua  hirviendo  en  proporción  de  una  mi- 
tad del  volumen  de  jugo  y  pulpa. 

2.078.  Vino  de  frenan.  — Estripadas  las  fresas  se  añade 
una  libra  de  antear  por  cada  seis  cuartillos  ole  sumo,  y  se 
deja  fermentar  por  veinticuatro  horas.  Pasado  este  tiempo 
se  pone  al  fuego  y  se  clarífica,  dejándolo  en  seguida  formen • 
tar  por  ocho  dias.  Luego  se  filtra  y  se  embotella. 

Algunos  añaden  medio  cuartillo  de  aguardiente  por  cada 
doce  de  licor,  y  no  embotellan  hasta  cuatro  meses  después 
de  hecha  esta  mésela. 

2.079.  Vino  de  guinda*. — Gomo  el  ñe  capuline*  (véase). 

2.080.  Vino  de  limón.  — Separada  con  un  cuchillo  la  par- 
te  exterior*de  la  cascara  del  limón,  se  corta  la  fruta,  se  ex- 
prime,y  se'  pone  la  cascara  separada  dentro  del  sumo  por 
veinticuatro  lloras,  juntamente  con  doce  onsaa  de  asacar 
por  cuartillo  de  sumo,  f  Tres  días  después,  se  añade  medio 
cuartillo  de  aguardiente  por  cuatro  de  mezcla,  y  se  deja 
fermentar  y  aclarar  por  espacio  de  quince  días»  antes  de 
filtrar  y  embotellar. 

2.081.  Vino  de  durazno*. — Como  el  de  ckahacano* ,  au- 
mentando de  un  tercio  la  cantidad  de  azúcar, 

2.082.  Vino  d*  membrillos. -~ Limpia  la  pelusa,  cortados 


251 

en  trozos  y  separadas  las  pepitas,  se  machacan  bien  y  se 
aprensan  para  extraer,  todo  el  zumo,  que  se  clarifica  al  fue* 
go  después  de  añadir  dos  libras  de  azúcar,  una  copa  de  vi- 
no blanco  y  dos  cuartillos  de  agua  por  cada  cuatro  de  zumo. 
Entretanto  se  hace  almíbar,  se  incorpora  con  la  mitad  de  su 
peso  de  aguardiente,  y  con  esta  mezcla  se  da  fuerza  al  vino 
de  la  fruta,  que  se  dejará  fermentar  antes. 

2,088.    Vino  de  moras. — Entripadas  como  cualquiera  otra, 
fruta,  se  mide  el  zumo  producido,  y  se  añade  por  cada  cuar- 
tillo uno  de  agua,  dos  adarmes  de  canela,  una  onza  de  azú- 
car y  media  copa  dé  aguardiente.    Al  cabo  de  una  semana, 
se  filtra  y  embotella. 

2,084.  Fino  de  naranja.  Se  prepara  como  el  de  limón; 
pero  siendo  su  zumo  menos  acídulo  que  el  de  éste,  se  dis- 
minuirá la  cantidad- de  azúcar,  y  acaso  no  seria  inoportuno 
en  ciertos  casos,  añadir  una  poca  de  agua  al  zumo,  y  aumen- 
tar la  dosis  de  aguardiente. 

Muchos  mas  Tinos  podríamos  citar,  pero  creemos  bastan 
los  indicados  para  dar  una  idea  de  la  manera  de  preparar- 
los, y  del  método  de  dolcuracion  y  alcoholizacion  que  debe 
seguirse  según  la  clase  de  fruta  de  que  ze  trate» 


2ft* 


H!  811*1  VtVISVWL 


1 1  «e>  1 1 


ENFERMEDADES  MAS  COMUNES- 

2,085.  Tndigegtum.-^S\  e*  leve  se  corrige  fácilmente  to- 
mando algunas  tasas  de  t¿,  mansmnilla  ó  flor  de  til»,  con 
azúcar  y  unas  gotas  de  agua  de  flor  de  naranja.  Pero  sí  es 
grave  y  han  sobrevenido  vómitos,  se'  seguirá  propinando  al 
doliente  bebidas  temperantes,  emolientes,  y  prescribiéndo- 
le dieta  absoluta.  8i  hubiese  náuseas  y  conatos  para  vomi- 
tar sin  conseguido,  se  promoverá-  bebiendo  agua  tibia  en 
abundancia,  haciendo  al  mismo  tiempo  cosquillas  en  la  epi- 
glotis  ó  campanilla,  y  si  todo  esto  fuese  insuficiente*  se  ha- 
rá uso  de  agua  emetisada.  (TTn  grano  de  tártaro  emético,  di- 
suelto en  dos  vasos  de  agua  tibia,  se  toma  en  tres  6  cuatro 
veces,  dejando  que  pasen  algunos  minutos  de  intervalo  en- 
tre una  y  otra.) 

En  fin,  si  hubiese  trascurrido  mucho  tiempo  de  la  comi- 
da, causa  de  la  indigestión,  y  los  alimentos  hubiesen  bajado 
ya  á  los  intestinos,  además  de  las  bebidas  indicadas  se  le 
administrarán  lavativas  emolientes,  como  el  cocimiento  de 
raís  de  malvavisco  ó*  linasa. 


fes 

2.086.  '  Picadura  ó  herida  hecha  con  instrumento  agudo.  — 
Si  fuese  ocasionada'  por  haberse  clavará  alguna  espinad 
otro  cuerpo  extraño,  lo  primero  que  ha'  de  hacerse  es  ex- 
traerlo, comprimiendo  en  seguida  suavemente  la  herida  pa- 
ra que  sangre.  Se  lavará  después  con  rtgna  fría  y  se  envol- 
verá en  un  lienzo  limpio  y  suave.  Mas  si  sobreviniese  Infla- 
mación, en  este  caso  se  darán  lociones  con  cocimientos  emo- 
lientes,-aplicando  á  lar  parte  cataplasmas  dé  miga  dé^pari  6 
de  harina  de  linaza.  • .  •  •  " 

2.087.  CoHndnta  hecha  con  instrumento  cortante. — lluego 
que  sucede  esta  desgracia,  se  lává  la  Keridk  con  agua*  Iría, 
se  limpian  y  juntan  los  bordes  cuanto  es*  posible,  filante^ 
niéndolos  unidos  con  el  auxilio  de  unas  tiritas  dé  tafetán 
inglés,  y  «e  aplica  eñoima  una  plancheta  dé  hilas  muy  del- 
gada, sujetándolo  todo  con  una  venda.    *         ••'  ' 

Lo  mas  importante  en  estos  accidentes  es  precaver  y  evi- 
tar la  inflamación  6  supuración.  Es  muy  perjudicial  aplicar 
á  la  parte  perejil,  tabaco,  agua  salada,1  ungüentos  y  vanas 
plantas  que  aconseja  la  ignorancia.  Si  por  desgracia  se  hu- 
biere hecho  uso  de  estos  remedios,  se  procurará  neutralizar 
sus  malos  efectos  aplicando  á  la'  herida  cataplasmas  émo^ 
tientes.  Guando  la  cortadura  es  peca  profunda  y -no  muy 
larga,  se  cura  en  dos  d  tres  días,  óbserVando^l  méHodo  in- 
dicado: .■'-.-•.:  -■.■"   ■■*••"  "--     ' 

También  es  muy  provechoso  lavarse  con  agua  en  la  cual 
se  echa  tintura  de  árnica  en  cantidad  regular,  y  poniéndo- 
se defensivos.  Cura  fácilmente  y  evita  la  inflamación." 

2.088.  Pieadnras.  --tía  abeja',  la  avispa,  abejón',  etc. ,  están 
armados  con  un  aguijón,  que  dejan  dentro  de  la  parte  pioa- 

JLA  COOINXBA  POBLANA. — TOM.  II. — 17. 


264 

da,  «muido  un  dolor  vivísimo,  al  que  sobreviene  instan* 
táneamente  binohaaon  local  y  pulsaciones  dolorosas.  El  pri- 
mer cuidado  ha  de  ser  extraer  el  aguijón  con  anaa  pinas  6 
la  punta  de  un  alfiler,  y  hecha  cata  diligencia,  ae  cubrirá  la 
herida  con  un  Heneo  fino  empapado  en  aceite  de  oliva  6  ca- 
rato comen,  al  que  ae  añedirán  unas  gota*  de  láudano  liqui- 
do de  Sydenham. 

2,08t<  Oriiim  en  fas  mama* — Paiacunrestamcomodidad 
beata  con  abetenatea  por  algún  tiempo  de  meter  las  manca 
alternatiTaineate  en  agua  caliente  y  después  en  otra  fría  6 
en  lejía;  frotarlas  con  sustancias  grasas,  como  aceite  de  oli- 
va» manteca  fresca  sin  ml9  carato  de  Galeno,  y  resguardar- 
las del  aire  y  frió. 

2.090.  Bemga* — El  medio  mas  eJices  para  extirparlas 
es  quemarla*  con  ácido  nítrico  (agua  fuerte).  Antes  de  ha- 
cer uso  de  este  cauterio,  se  cubrirán  las  partes  inmediatas, 
extendiendo  todo  al  rededor  una  sustancia  glutinosa  6  un 
parche  de  diaquflon. 

2.091.  Sorcumpio*. — Cuando  el  sarampión  se  presenta 

franca  y  fácilmente,  basta  poner  al  niño  á  dieta,  hadándole 
guardar  cama,  evitando  toda  corriente  de  aire  frió  y  todo 
cuanto  pueda  detener  la  marcha  de  la  enfermedad  ú  operar 
una  retropolsion  del  exantema;  jamás  se  le  ponga  al  niño 
una  camisa  fría,  pues  semejante  imprudencia  costo'  la  vida 
á  muchos.  Dése  al  enfermo  uno  que  otro  vaso  de  tisana  de 
borraja,  alguna  infusión  de  flores  cordiales,  y  también  hor- 
chatas con  un  poco  de  nitro. 

Si  las  manchas  d emperecen  y  á  cata  desaparición  sucede 
el  desprendimiento  de  costras  mrmáosas»  ya  pasa  el  peligro; 


365 

las  manchas  lívidas  y  otearas,  y  también  las  que  aparecen  y 
desaparecen  alternativamente,  no  son  de  mny  buen  agüero. 

Al  momento  que  se  observe  qae  esta  enfermedad  no  signe 
sn  corso  ordinario,  llámese  al  módico. 

Por  último,  no  te  descuiden  las  enfermedades  que  puedan 
presentarse  después  del  sarampión,  por  leves  que  á  primera 
vista  parezcan.  Consúltese  sobre  ellas  al  médico  sin  pérdi- 
da de  momento. 

2.092.  Orina,  irritaciones  en  la  iqiga. — Estas  irritaciones, 
que  tan  comunes  son  á  cierta  edad,  se  calman  bien  tomando 
algunos  baños  de  asiento  emolientes;  estando  en  la  cama, 
cataplasmas  emolientes  en  el  bajo  vientre,  y  agua  de  brea 
para  bebida  usual.  Todo  esto  sin  perjuicio  de  consultar  al 
facultativo. 

2.093.  SI  agua  de  brea,  — Se  prepara  poniendo  en  infusión, 
por  diez  6  doce  dias,  una  parte  de  brea  (purificada)  en  ocho 
veces  su  peso  de  agua  fría;  6  bien  revolviendo  la  brea  por 
algunos  minutos  en  cuatro  partes  de  agua..  Fútrese  en  segui- 
da, y  se  guarda  en  vasos  bien  tapados. 

2.094.  Vejez.— Mientras  que  en  los  viejos  todos  los  de- 
más sentidos  se  embotan  y  debilitan  mas  ó  menos,  el  del 
paladar  adquiere,  por  excepción,  mas  fuera*  y  delicadeza. 
Esta  es  la  razón  porque  casi  todos  los  viejos  tienen  una  dis- 
posición natural  para  la  gastronomía,  y  deben  combatir  sn 
propensión  á  comer  demasiado  cuando  su  posición  les  per- 
mita tener  una  buena  mesa,  Las  indigestiones,  nocivas  en 
toda  edad,  lo  son  particularmente  á  la  salud  de  los  viejos 
que  han  pasado  dé  los  sesenta  años.  Cada  indigestión  á  es- 
ta edad  acelera  la  decadencia  senil,  y  puede  ser  causa  de 
graves  consecuencias.    Desde  luego  la  sobriedad  no  es  solo 


266 
un  limpie  consejó  higienion  dictada  por  la  prudencie;  es  una 

S)B^^^^e^snn,^iBen^nie 

Dicen  que  los  viejo»  mueren 
-  Por  comida  ó  por  caída: 
*  Ande,  pues,  con  tiento  el  viejo, 
Y  modere  la  comida. 

2,096.  Parú**.— Le  dilatación  parcial  y  permanente  de  las 
Tenas,'  muy  coman  en  los  sujetos  que  acostumbran  perma- 
necer bástante  tiempo  en  pi¿,  puede  degenerar  en  úlceras 
de  mala  calidad  si  no* se  procura  utilitaria  compresión  des- 
de un  principio,  pero  de  una  manera  lenta'  y  gradual,  usan- 
do á  dicho  efecto  unas  medias  de  cutí,  ó  mejor  aún  otras 
hechas  de  piel  de  perro.  Con  tan  sencilla  precaución;  unida 
á  la  mas  esmerada  limpiesa,  se  puede  impedir  todo  resulta- 
do ulterior.  -       • 

Las  'medias  de  tejido  de  goma~+láMtic*  ton  las  mas  efica- 
ces, y  las  recomendamos  con.  mucho  interés. 

2,096.  Vómito  negro  ó  JUbre  anttoriUa. — nUna  anciana, 
llamada  Mariquita  Orilla,  ha  descubierto  un  remedio  eficaz 
para  el  Vomito  negro  y  la  fiebre  amarilla,  con  el  cual  se  han 
curado  completamente  varias  personas  después  dé  haber  de- 
clarado los  médicos  que  .no  había  esperanza'  alguna  de  sal- 
vación, y  que  los  pacientes  debían  morir  dentro  de  pocas 
horas.  Este  remedie)-  es  el  sumo  de  hojas  dt  verbena  macha- 
cadas, tomado  en  pequeña  dosis  tres  veces  al  día,  y  aplicado 
en  inyecciones  cada  dos  horas;  hasta  que  queden  entera- 
mente desocupados  los  intestinos.  La  verbena  es  un  arbusto' 
silvestre  que  se  da  casi  en  todas  partes,  y  particularmente 


257 

en  los  terreno*  bajos  y  húmedos.  Los  médicos  han  adopta- 
do su  uso,  y  en  consecuencia  ya  spn  pocos  ó  ningunos  los 
que  mueren  de  aquellas  terribles  enfermedades.  Hay  dos 
clases  de  verbena,  una  macho  y  la  otra  hembra;,  la  ultima  es 
la  que  mas  se  usa.it 

2.097.  Altnotranas.  — Los  mejores,  específicos  centra  ellas 
son  la  temperancia,  la  sobriedad  y  el  ejercicio  sin  fatiga- 
Para  promover  la  evacuación  es  bueno  el  vapor  de  agua  ti- 
bia,  ó  un  paño  mojado  en  espíritu  de  vino  tibio,  ó  cataplas- 
ma de  pan  y  leche  ó  de  puertos  fritos  con  manteca;  si  nada 
de  esto  basta,  se  .aplicarán  las  sanguijuelas,  que  si  agarran  á 
las  mismas  almorranas  será  mucho  mejor.  Si  el  dolor  es  muy 
grande,  se  puede  hacer,  un  lenitivo  con  dos  onzas  de  un- 
güento emoliente  y  media  de  láudano,  batidas  con  una  ye- 
ma de  huevo  para  aplicarlo  á  la- parte. 

También  es  bueno  derretir  tocino  viejo  del  mas  salado 
que  se  pueda  hallar,  se  pasa  por  un  lienzo,  blanco,  y  en  esta 
grasa  se  derrite  un  poco  de  cera  blanca;  úntese  con  la  pun- 
ta del  dedo  muchas  veces  el  nial. 

Cuando  el  flujo  de  las  almorranas  es  moderado  ó  periódi- 
co, no  hay  que  detenerlo;  y  si  es  ezesivo,  báñese  la  parte 
con  agua  de  hierra. 

2.098.  ¿Mi*. — Para  los  derrames*  de  bilis  se  emplea  con 
provecho  el  remedio  siguiente:  tómese  una  onza  de  raíz  de 
celidonia,  córtese  en  pedacitos  si  es  tierna  ó  redúzcase  á  pol- 
vo si  es  seca;  póngase  en  infusión,  en  un  cuartillo  de  vino 
blanco  y  bébanse  tres  ó  cuatro  cucharadas  de  éste  todas  las 
mañanas.  £1  uso.de  las  achicorias,  amargas  es  también  muy 
saludable. 

También  es  bueno  tomar  en  ayunas  agua  en  la  que  se 


266 

hierre  cascara  de  nabo  y  de  limos.  Tómese  un  pocilio  du- 
rante algunos  dias  y  será  provechoso. 

2,099.  BeumatinmK — Varios  ton  loe  remedioe  que  ee  dan 
peí»  el  reumatismo;  atajemos  algunos  de  loe  mas  sencillos. 

Tómente  como  unos  tres  puñado*  de  rábano*  y  oórteselee 
en  rodajites,  póngateles  en  una  sartén  en  agua,  y  enerase- 
lee  poco  á  pooo;  en  seguida  se  extiende  ana  porción  de  hilas 
del  grandor  de  la  parte  dolorida,  poniendo  encima  los  rába- 
nos pulrerisados  por  debajo  con  incienso,  j  apliqúese  esta 
cataplasma  á  la  parte  afectada',  estando  bien  caliente  el  en- 
fermo en  la  cama;  deba  repetirse  ceta  remedio  por  cuatro  ó 


Machaqueóse  muchas  hojas  de  rábanos  hasta  reducirlas 
á  pasta,  y  envuélvanse  con  ellas  las  plantas  de  los  pies  del 
enfermo,  que  para  entonos*  ya  debe  estar  muy  caliente  en 
cama.  Esta  remedio  produce  un  copioso  sudor,  que  ordina- 
riamente causa  la  cura. 

Tómese  onsm  y  media  de  aceite  de  almendras  dulces,  tres 
dracmas  de  agua  de  carmelitas  compuesta,  media  dracma 
dé  láudano  liquido  de  Sydenham,  todo  medianamente  mea- 
dado:  se  echa  de  ello  dos  ó  tres  gotas  en  el  hueco  de  la  ma-. 
no  y  se  frota  la  parte  dolorida  hasta  que  el  líquido  se  ha- 
ya evaporado  para  hacerle  entrar  por  loa  poros  de  la  piel. 
Be  repite  esta  operación  todos  ka  días,  dos  tcoss  por  la  tar- 
de y  una  por  la  mañana  hasta  el  perfecto  aliño* 

Tómese  de  raía  de  canaleja  y  flor  de  romero,  media  hbra 
de  cada  cosa;  se  quebranta  y  se  pone  en  infusión  en  dos  li- 
bras de  aceite  oomun  por  espacio  de  veinticuatro  horas, 
después  se  oueoe  todo  con  dos  libras  de  vino  tinto  hasta  que 
consuma  toda  la  humedad;  se  cuela,  se  embotella,  se  tapa 


259 

y  te  guarda  para  el  uso.    Este  aceite»  llamado  del 

efioas  para  los  dolores  reumáticos  untando  con  el  las  partes 

doloridas. 

2.100.  Lombrices — Tómense  los  poWos  vermífugos  de 
Bal,  que  se  hacen  de  iguales  partes  de  ruibarbo,  escamonea 
y  oalomel,  oon  doble  oantidad  de  asacar  refinada,  al  peso  dé- 
los demás  ingredientes,  se  mesóla  todo  y  se  reduce  á  polvos 
finos.  La  dosis  para  un  nifio  es  de  dies  á  veinte  granos,  una 
ó  dos  veces  á  la  semana,  y  una  draema  para  un  adulto.  De- 
be evitarse  que  los  niños  coman  dulces,  yerbas  crudas,  tal* 
ees  6  frutas  verdes. 

2.101.  ify/rwkto,— Para  desterrar  este  mal  basta  promo- 
ver la  traspiración,  hacer  uso  de  los  sudoríficos  y  de  la  die- 
ta. Algunas  veces  son  conducentes  los  bafios  de  pies  y  pier- 
nas en  agua  tibia,  oomo  igualmente  los  sinapismos. 

Para  obtener  un  oopioso  sudor  se  pelan  y  quebrantan  cin- 
co 6  seis  granos  de  cacao  en  crudo,  poniéndolos  á  hervir  en 
tasa  y  media  de  agua  oomo  de  tomar  café*,  hasta  que  quede 
en  una;  después  se  le  pone  un  poquito  de  manteca  de  cacao, 
tomándolo  oon  azúcar  todo  lo  mas  caliente  que  se  pueda, 
dentro  de  la  cama. 

2.102.  Ton. — Hágase  un  cocimiento  de  cebada,  malvavis- 
co y  salvado;  cuando  esté  hecho  se  afiade  un  panado  de  flor 
de  sanco,  y  se  hace  que  dé*  otro  hervor.  A  tiempo  de  tomar- 
se se  echa  en  la  tasa,  una  yema  de  huevo  y  cantidad  sufi- 
ciente de  asacar  candi.  Debe  tomarse  tibio, 

2.103.  Contusión**. — Si  no  hay  desolladura,  basta  cubrir 
la  parte  contusa  oon  un  paño  de  aloojiol  alcanforado,  hume- 
deciéndolo de  cuando  en  cuando,  6  bien  de  agua,  sal  6  vi- 
nagre.   El  dolor  del  golpe  desaparece  inmediatamente. 


980 

se  declare  U  infrinaoion,  se  pondrán  cataplasma*  de  harina. 
4e  linaza,  pan  rallado  y.  leche,  desleído  con  agua  dé  malva- " 
viseo.    Si  la  contusión  fuere  de  alguna  gravedad,  ae  deberá 
llamar  al  facultativo,  sin  perjuicio  fie  aplicar  á  prevención 
los  remedios  indicados,,  que  impiden  progeaar  el  mal  7  fa- 
cuitan,  la  curación.  JB1 ,  agua  de  Árnica  es,  e¿  mejor  .medica- 
mento.;       .^    .        ,  ..,..,  .;-..  .  .   ,.  ...   ...:  .. 

.  2.104..  Escarlatina.— Jtara vez  *e.  necesita  de  medicina  en 
esta  enfermedad;  peste  que  el  enfermó  esté  abrigado,  ae. 
abstonga.de.  o^es,  Upares  fuerte»  y  cordiales,  7  que  beba 
coaaa  freaoaa  y  diluentes.  Si  ee  maligno  el  carácter  que  to- 
ma esta  dolencia,  de£e  adoptarse  el  régimen  quecorrespon- 
de  ék  Us  fpbres/.púftÍQ>* 

2,106.  OMrücciqHu. — Para  desterrarla*  es  muy  bueno 
beber  ún  vaso  de  agua  con  un  panal  al  despertar  por  la  ma- 
nana.  El  nao  de  lavativa»  pon  agua.de.  malvas  y  cebada  es 
también  muy  conveniente.  . 

2,106.  CWoo*.— :Eñ  general,  para  todos  los  oolicos,  in- 
cluso  el  bilioso,  son  útiles,  las  siguiente*  reglas:  primera  ba- 
ñar pies  y  pierna*  en  agua  tibia;  segunda,  aplicar  vejigas 
llenas  de  agua  caliente  6  lienzos  mojados  en  ella  al  estóma- 
go y  las  entraña*;  torcera,  tomar  con. abundancia  bebidas 
diluentes  y  muetyaróosaa;  cuarta,  lavativas  emolientes  cada 
dos  6  tres  horas,    ....'. 

En  muchos  casos  se- ve  desaparecer  el  célico  con  solo  apli- 
car al  vientre  un  lienzo  de  alcohol  alcanforado. 

2K107.  Diarrea.-— b*  diarrea  generalmente  no  es  otra  co- 
sa que-  loa  esfuerzos  de  la  naturaleza  para  desembarazarse 
de  los.  productos  4e  una  mala  digestión,  ocasionada,  Vjen 
por  al if^en tos  malsanos,  ó  por, haber  sufrido  mucho  frió 


261 

después  de  comer.  Ningún  cuidado  exijen  las  diarreas  cuan- 
do son  pasajeras;  pero  si  -son  tenaces,  acompañadas  de  pu- 
jos cólicos  intestinales  y  complicadas  con  calofríos,  calen- 
tura y  jsed  ardiente,  deben  cuidarse  á  remediarlas  lo  mas 
pronto  posible.  ... 

Lo  primero  es  poner  al.  enfermo  á  dieta,:  y  restablecer  el 
sudor  por  medio  de  sustancias  calientes  ó>  arroz»  pan,  y  fé- 
cula,, suavizándolas  con  algún  jarabe.  «También  son,en  extre- 
mo útiles  las  lavativas  de  cocimiento  de  linaza  con  cabezas 
de  adormideras,  añadiendo,  un  poco  de  alcanfor  molido,  des- 
leído en  una  yema  de  hueva  Los  baños  de  pies,  loamedios 
baños  y  aun  los  baños  enteros,  con  el  restablecimiento  de  la 
traspiración,  son  los  medios  mas  á  propósito  para  conte- 
nerla. 

2.108.  .Tor&duras.— Lo  primero  que  debe  hacerse  es  me- 
ter la  parte  dañada  en  agua  fría  y  disponer  unos  paños  de 
agua  de  vegeto  ó  agua  sedante.  Si  pop  esto  no  se.  experimen- 
ta alivio,  se  aplicarán  las  mismas  cataplasmas  indicadas  pa- 
ra las  contusiones. 

2.109.  Náusea*. — Las  de  las  mujeres  embarazadas  no  son 
en  general  peligrosas;  cuando  son  tenaces  se  cortan  con  unas 
cucharadas  de  vino  de  Málaga  .ú. otro  generoso..  .Lea  perso- 
nas'propensas  á  ellas  no  £eben  comer  mucho,. 

2.110.  Mal  de  otóos.  -r-Se  mézala  aceite  de  almendras  y  de 
ámbar,  y  se  aplican  una*  hilas  empapadas,  á  la  parte  dolori- 
da; si  se  hubiese  introducido  algún  insecto,  se  echa  aceite, 
alcanforado  en  el  conducto  auditivo  y  se  pone  .por  algún 
tiempo  un  taponcito  de  algodón  en  rama.    .. 

SI  jugo  de,  ruda  cocido  con  corteza  de.  granada,  vertido 
en  el  oído,  cura  el  ruidp  5  sonido.de  los  mismos. 


209 

SI  jugo  del  perifollo,  mesolado  oon  sgue  común  é  inyee» 
.  tado  en  lo*  oídos,  disipa  la  píoamn  cuando  inoomoda  da- 
maaiedo. 

2,11L  Dolor*  <fe  mueU*.— Inútil  as  describir  lo  insufri- 
ble  da  este  dolor;  tolo  debemos  advertir  que,  cuando  va 
aoompaftado  de  fluxión  en  el  oarrillo,  es  asnal  de  que  la  oá- 
rías  está  en  la  encía  y  ka  penetrado  hasta  la  rala;  lo  mas  se- 
guro es  asearla  para  que  no  dañe  á  las  demás.  A  fin  de  ali- 
•  viar  el  dolor,  es  bueno  todo  lo  que  promueva  la  salivación, 
como  mascar  genciana,  cálamo  aromático,  rala  de  pelitre, 
tabaco  y  semilla  de  mostea».  Si  la  muela  está  horadada,  ha 
de  taparse  oon  almáciga,  cera  6  plomo  para  que  no  entre  el 
aire. 

Para  las  inflamaciones  de  la  boca  as  debe  hacer  uso  de  bu- 
ches, compuestos  de  cocimiento  de  malvas,  adormideras  y 
malvavisco;  si  no  oede  la  inflamación,  se  pondrán  en  el  car* 
ríllo  unas  cataplasmas  compuestas  de  los  mismos  simples  y 
harina  de  linas*. 

2.112.  Dotar  <U  estómago.— 8i  éste  procede  de  un  vicio  en 
la  digestión,  lo  que  puede  sospecharse  si  es  muy  violento 
después  de  comer,  se  aliviará  6  desterrará  con  el  ejercicio) 
especialmente  embarcándose  6  haciendo  largas  jornadas  á 
caballo  6  en  carruaje.  Si  procede  de  flato,  es  fueras  abete- 
nerse  de  alimentos  ventosos,  como  nicas,  legumbres,  etc., 
y  suele  ser  útilísimo  un  trabajo  activo  corporal  y  la  varia- 
ción de  aguas. 

2.113.  Gafos.— Tomase  una  hoja  de  yedra,  pásese  al  tra- 
vés de  una  llama  para  quitarle  cualquiera  sociedad  de  su 
superficie,  apliqúese  sobre  el  callo  y  sujétese  oon  un  peda- 
cito  de  lienso  fino,  sin  dañar  al  dado  que  se  halle  afectado. 


263 

En  breve  se  pondrá  amarilla  la  soetaneia  del  callo,  que  es 
la  señal  de  su  próxima  curación. 

Se  cubren  loe  callos  ó  juanetes  con  una  tirita  de  cerato 
alcanforado,  cubierta  con  otra  de  hule,  y  desapareo*  el  do* 
lor.  Tómese  una  onsa  de  cera  amarilla  y  goma  amoniaco, 
una  onsa  de  cada  cosa  y  seis  dracmas  de  cardenillo.  Se  pona 
4  derretir  la  cera  y  la  goma  juntas,  y  después  se  incorpora 
el  cardenillo. 

Este  emplasto  ablanda  los  callos  y  clavos  de  los  pies,  y  los 
extrae  enteramente  si  se  aplica .  todos  los  días  por  algunas 
semanas. 

2.114.  tfafajicmfi — Es  excelente  preservativo  contra  ellos 
lavarse  en  agua  fría  desde  el  otoño  y  todo  el  invierno,  to- 
dos loe  dias,  las  manus  y  los  pies  ó  tres  ó  cuatro  veces  por 

Tómese  una  onsa  de  oera  blanca,  una  de  tuétano  de  vaca 
y  dos  de  manteca  de  cerdo  sin  sal;  cuezanse  en  una  vasija 
vidriada,  y  después  de  haber  cocido  un  poco,  pásese  por  un 
lienzo.  Al  tiempo  de  acostarse  se  extiende  sobre  los  saba- 
ñones una  porción  de  esta  pomada,  y  sobro  ella  el  vendaje; 
se  repite  esta  operación  cuatro  ó  cinco  dias,  y  desaparecerán. 
Si  se  espera  4  que  revienten  solo  la  primavera  puede  cu- 
rarlos. 

2.115.  ¿tamo. — La  mejor  medicina  es  el  azufre  usado  in- 
terior y  exteriormente;  las  partes  mas  cargadas  se  pueden 
untar  con  ungüento  compuesto  de  dos  onzas  de  flor  de  azu- 
fre,  dos  dracmas  de  sal  amoniaco  crudo,  en  polvo  muy  fino, 
con  ouatro  onzas  de  manteca  fresca  de  puerco;  si  se  le  aña- 
de un  escrúpulo  ó  media  draoma  de  esencia  de  limón,  le 
quitará  el  olor  desagradable;  al  tiempo  de  acostarse  se  un- 


364 

taran  los  extrema  con  ana  porción  del  tamaño  de  una  noel 
pequeña,  doe  ó  tres  vece*  á  la  semana,  Rara  ves  ee  necesita 
untar  todo  el  jooerpo;  pero  en  tal  eaeo  no  te  ha  de  hacer  de 
una  ves,  sino  por  partee. 

2.116.  Orina.  Ee  muy  peligroeo  detener  la  orina,  por- 
qoe  pueden  adquirí  cae  fácilmente  innamaoionea  én  la  veji- 
ga. Cuando  ae  observa  que  la. orina  en  res  de  tener  el  color 
claro,  ee  rojisa  y  eapeaa,  ee  debe  refreecar  y  entar  toda  oía- 
se de  exeao  en  loa  aliónenlos,  llevando  una  vida  lo  mas  tran- 
quila posible. .  La  orina  es  un  barómetro  de  4a  salud. 

2.117.  Socarro  que  alafre  dar*  4  fot  atfxiado*  pordfirio. — 
Se  desnuda  al  jenfenno,  se  le  envuelve  en  una  buena  man- 
ta y  se  le  mete- en  la  cama  sÚLcalentarla.  Después  sálame- 
te en  un  baño  de  agua  tibia,  que  se  irá  templando  poco  á 
poco,  añadiendo  agua  caliente  hasta  que  tenga  un  calor  re* 
guiar.  Este  aumento  gradual  de  calor,  deberá  darse  en  el  es- 
pacio de  media  hora.  Mientras  que  el  enfermo  está  en  el 
baño  se  le  rociará  por  ocho  6  nueve  veces  el  rostro  con  agua 
fría  limpiándolo  siempre  oon  un  lienao  enjuto. .  Se  le  aplica- 
rá á  la  naris  un  frasco  de  vinagre  muy  fuerte  6  de-álcali  vo- 
látil, haciéndole  tragar  al  mismo  tiempo  cucharadas  de  agua 
fría  mezcladas  oon  algunas  gotas  de  agua  de  azahar. ,  Guan- 
do la  deglución  sea  mas  libre  se  le  dará  un  ligero  caldo-d  nn 
▼aso  de  vino  aguado.  Si  continuase  el  enfermo  en  su  letar- 
go,, se  le  administrarán  lavativas  irritantes;  y  si  volviese  de 
él,  deberá  tratarse  como  convaleciente  de  una  grave  •enfer- 
medad. 

2.118.  Atfiasxado%  per  «í-oaíor.— Lo  primero  qoe  debe  ha- 
cerse es  trasportar  al  enfermóla  un  sitio  menoa  caliente,  pe- 
ro no  demasiado  frío,  y  sangrarle  de  la  vena  yugular;  haga- 


265 

■ele  beber  agua  fría  con  un  poco  de  vinagre  y  suminístrente- 
le lavativa*  con  la  misma  agua.  Si  después  de  estos  remedios 
no  sintiese*  alivio,  tendrá  que  recurrirse  á  una  aplicación  de' 
sanguijuelas  A  las  sienes. 

2,110.  Asfixiados  por  el  carbón. — Sin  pérdida  de  tiempo 
se  pondrá  al  paciente  al  aire  libre,  aunque  sea  muy  frío,  se 
le  desnudará  y  meterá* en  la  can»  boca  arriba,  colocando 
su  cabeza  y  el  pecho  en  -posición  mas  elevada  que  lo  restan* 
te  del  cuerpo,  para  facilitar  la  respiración;  Luego  se  le  dan 
lociones  en  todo  él  cuerpo  con  agua*  sedativa,  y  después  fre- 
cuentes friegas  con  pomada  alcanforada  en  el  pecho  y  entre 
las  dos  espaldillas.  Se  hace  aspirar  el  agua  sedante,  dando 
á  beber  algunas  gotas  de  ella  en  un  vaso  de  agua  clara,  cuan- 
do el  asfixiado  se  halle  en  estado  de  tragar;  en  el  cuello  y 
la  cabeaa  ee  le*  aplican  también  lienzos  de  agua  sedante. 

2,120.  Pcuuviixos. — Póngase  una  cucharada  de  ceniza  de 
sarmiento!  en  un  vaso  regular  de  agua  dulce  caliente,  y  bá- 
tese el  dedo  con*  ésta  hasta  curarse.  Este  medio  ha  sido 
muchas  veces  empleado  con  feliz  éxito,  y  se  recomienda 
por  su  naturalidad  y  sencillez. 

2421.  Gangrena. — Para  impedir  que  se  gangrenen  las 
heridas  se  polvorean  con  azúcar.  Es  muy  probado  también 
el -azúcar  disuelta  en  ana  decocción  fuerte  de  las  hojas  .dé 
nogal.*' 

2.122.  Ulcera»  en  la  boca, — Hágase  .un  bálsamo  compues- 
to con  cuatro  onzas  de  aceite,  cuatro  de  Vino  y  una  de  azú- 
car; hiérvase  todo  junto  hasta  consumirse  el  vino,  y  toqúe- 
se á  menudo  la  úlcera  con  él»  Este  remedio  es  bueno  para 
heridas,  llagas  y  otra»  cortaduras^ 

2.123.  Fetidez  de  aliento. — La  fetidez  de  aliento  tiene  su 


origen  en  el  estomago,  y  son  varias  Im  mmm  que  contri» 
boyen  á  ello.  Bar*  hacerla  desaparecer  debe  principiarse 
por  gargarismos  do  agua  talad*,  enrojándola  al  propio  tiem- 
po por  la*  narioee,  meaolad*  oon  alguna*  gotas  de  rinagre 
de  alcanfor,  y  éVte  pulverisado  y  tomado  por  lea  naricea, 
masticando  continuamente  hojea  de  menta» 

El  plan  propuesto,  seguido  oon  oonatanáa,  es  capas  por 
sí  solo  de  purificar  el  aliento  mas  pestilente, 

2.134.  Z)úíooa4rwm.— -Nada  mas  fácil  que  una  dislocación 
del  pié*,  braso  ú  hombro:  estas  consisten  en  la  separación  de 
un- hueso  del  lugar  que  naturalmente  ocupa»  8iempre  que 
estas  se  Tarifican,  loa  músculo*  ee  oontraen  fuertemente, 
sin  que  pueda  conseguirse  su  primitiva  colocación  sin  gran* 
dea  esfuerzos. 

Aconsejamos  á  las  persona*  que  desgraciadamente  sufran 
alguna,  no  se  dejen  curar  por  aquellos  que  (aun  cuando  de 
la  mejor  buena  fe*  le  ofreaoan  sus  servicios),  oareacan  de  loa 
conocimientos  necesarios. 

2.135.  Clocóte*. — Los  claootea  son  unos  tumores  inflama- 
torios poco  voluminosos,  pero  que  producen  un  dolor  pun- 
tante y  agudo;  generalmente  no  aparece  mas  que  uno,  pero 
laa  mas  veces  sucede  que  antes  de  la  curación  del  primero, 
haya  salido  otro  inmediatamente;  su  color  rojo  vivo  y  una 
punta  saliente  en  el  centro.  Su  principal  remedio  consiste 
en  cataplasmas  emplásticas,  susceptibles  de  acelerar  su  rom- 
pimiento, sin  que  haya  necesidad  de  hacerlo  oon  instrumen- 
tos. Después  que  hayan  supurado,  se  aplica  sobre  él  un  per» 
ehe  de  ungüento  de  plomo,  podiendo  asegurarse  son  de  cor- 
ta duración,  y  aunque  generalmente  molestos,  no  ofrecen 
consecuencias  doasgradiblos, 


267    - 

2.126.  Oftalmía.— La  oftalmía  ó*  im)  de  ojos  ei  una  en- 
fermedad qoe  ataca  á  Ina  niños  mas  que  alas  personas  adul- 
tas; porque  ai  bien  ea  verdad  que  éstas  laa  padecen  con  al- 
guna frecuencia,  reconoce  principios  que  ezije  deade  luego 
la  presencia  del  facultativo.  En  loa.  primeros  se  da  siempre 
á  conocer  por  la  inflamación  de  los  párpados,  el  horror  á  la 
lúa  que  evita  cerrándolos  en  cuanto  aparece  esta  enferme- 
dad, y  por  el  pos  que  arroj*  con  mayor  6  menor  exceso. 

Se  aplicará  como  el  mejor  colirio  la  misma  Teche  de  su 
madre  6  nodriza;  y  el  agua  de  harina  de  linaza  6  de  malva- 
risco,  que  dan  ambas  muy  buenos  resultados  en  loa  princi* 
pios;  pero  si  á  pesar  de  este  lavatorio  oontintia  la  oftalmía 
ai  se  quiere  en  el  mismo  estado,  se  varía  el  plan  lavándole 
con  agua  de  llantén  mezclada  con-  sulfato  de  sino,  en  la  pro- 
porción de  grano  y  medio  de  este  por  una  onza  de  aquella, 
y  en  último  caso  la  misma  agua  de  llantén  llevando  en  di- 
solución por  cada  onza  un  grano  de  nitrato  de  plata.  El  tra- 
tamiento de  esta  enfermedad  debe  ser  tan  activo  como  lo  ea 
la  enfermedad  misma,  teniendo  muy  presente  que  la  lim- 
pieza de  laa  partes  afectadas  entra  por  mucho  en  su  curación, 
y  que  el  retraso  en  la  aplicación  de  loa  medicamentos  son 
pasos  aceleradoa  que  le  aproximan  á  la  ceguera. 

2.127.  Relíale*  de  la  muerte. — Entre  laa  diferente»  enfer- 
medades que  existen  y  atacan  á  los  individuos,  hay  algunas 
tan  particulares  que  dejan  al  paciente  por  espacio  de  mu- 
chas horas  en  situación  de  hacer  creer  que  realmente  no 
existe:  tales  son  la  asfixia,  la  eatalepsis,  los  accidentes  y 
otras,  en  laa  cuales  el  calor  es  casi  nulo,  la  respiración  y  pul- 
sación no  se  perciben ,  los  ojos  están  fijos  y  mustios,  con  al- 
gunas otras  circunstancias  que  engañan  alas  personas  faltaa 


968 

da  ciertos  conocimientos,  i  cuy*  falta  debo  únicamente  atri- 
buirse el  qoe  te  haya  procedido  al  enterramiento  de  persc¿ 
ñas  que  no  habían  muerto,  debiendo  algunas  ra  salvación  á 
una  pora  casualidad. 

Las  seniles  í  jas  de  qoe  un  individuo  ha  dejado  de  exis- 
tir son:  la  de  quedar  completamente  inmdvil»  la  cesación 
del  poleo  y  la  respiración,  el  calor  se  va  extinguiendo  gra- 
dualmente, la  piel  adquiere  un  color  amarillento,  los  miem- 
bros se  ponen  litantes,  los  ojos  hundido*,  empanados  é  in- 
móviles, y  cierto  olor  que  sé  desprende,  propiamente  cada» 
vírico,  queee  advierte  mas  ó*  menos  pronto,  según  la  tem- 
peratura y  la  enfermedad' que  ocasiona  la  muerte.    •  • 

2,128.  i2oeio.--J2*ta  enfermedad,  que  ataca  naturalmen- 
te á  ciertos  animales/  en  particular  4  los*  perro*  y  lobos,  no 
la  padece  el  hombre  sino  á  •  consecuencia  dé  la  mordedura 
de  animal  rabioso  ó  por  la  introducción  6  contacto  de  su 
baba  en  la  herida,  y  es  conocida  con  el  nombre'  de  hidrofo- 
bia. El  perro  que  se  ve  acometido  de  esta  enfermedad  k> 
manifiesta  con  su  abatimiento -y  tristes*-:  ladra  £  menudo, 
rehusa*  de  comer  y  beber,  6  lo  hace  en  muy  corta  cantidad; 
deja  de  repente-la  casa  de  so  amo  sin  dirección  fija;  lleva 
la  cabeza  muy  baja,  la  boca  abierta  f  llena  de  baba  espo: 
teosa  y  la  cola  caída.  Lo  primero  qué  debe  hacer  un  hom- 
bre, cuando  ha  sido' .  mordido  por*  un  animal  rabioso,  es  la- 
var la  herida  con  agua  caliente,  desliendo  en  ella  jabón  y 
sal;  poede. Cambien  hacerse  ooñ  lejía  ú  orines  calientes,  apre- 
tando la  herida  en  diferentes  direcciones  para  extraerla 
baba  que  el  animal  haya;  de  jado  en  'ella.  'Pospaos-  do  este 
baño,  que  se  ha  de  hacer  co?r  cuidad*  y  detención;  es  ne- 
cesario eauteriaar  la  Haga  con  un  hforro ;  candente  6  •éah 


269 

Agua  fuerte  6  con  el  ácido  nítrico,  de  manera  que  llegue  á 
toda  la  profundidad  6  extensión  de  la  herida,  sin  considera- 
ción al  dolor  que  cansa  esta  operación,  que  siempre  es  mu- 
cho menor  que  el  peligro  que  amenaza  de  no  aplicar  este  re- 
medio. Después  se  extienden  sobre  la  llaga  algunos  ungüen- 
tos propios  para  mantener  la  supuración,  y  refrescar  á  me- 
nudo. . 

Por  el  siguiente  método  se  puede  tener  una  eficaz  curación: 
Al  punto  que  un  perro  rahioso  muerde  á  una  persona  se  cu- 
bren las  sedales  de  la  mordedura  con  lienzos  de  agua  sedan- 
te, aunque  se  experimenta  algún  escozor.  Secos  los  lienzos, 
se  expolyorea  la  herida  con  alcanfor,  y  Be  ponen  planchas 
de  hilas  untadas  de  pomada  alcanforada,  que  se  sujetan  con 
medios  adecuados.  Se  aplican  cabezales  de  agua  sedante,  y 
se  dan  lociones  frecuentes  con  la  misma  agua.  Si  se  declara 
la  rabia,  sé  mete  al  paciente  en  un  bañó  alcalino  ferrugino- 
so muy  cargado,  tomando  las  precauciones  debidas.  Se  le 
ponen  en  el  cuello  lienzos  de  agua  sedativa  y  se  le  roda 
también  con  ella  la  cabeza.  Al  salir  del  baño  se  le  dan  frie- 
gas de  pomada  alcanforada,  y  se  continúan  las  lociones  de 
agua  sedativa  en  la  cabeza  y  por  todo  el  cuerpo  hasta  que 
calmen  los  accesos.  Entonces  se  le  purga  con  aceite  de  ri- 
cino, y  se  le  administrarán  lavativas  vermífugas;  también 
se  le  pueden  dar  lociones  con  alcohol  alcanforado. 

La  ropa  que  llevaba  la  persona  mordida  deberá  separarse 
y  lavarse,  procurando  que  antes  de  verificarlo,  no  tenga  roce 
con  otra.  Conviene  también  apartar  del  herido  toda  apren- 
sión, persuadiéndole  de  la  eficacia  de  los  remedios  que  se 
le  aplican.  Generalmente  se  debe  desconfiar  de  toda  mor- 
dedura hecha  por  un  animal  que  no  haya  sido  provocado. 

LA  COCINMLA  POBLANA. — TOM.  IT. — 18. 


2W 

2,129.  Quemadura*. — Como  las  quemador**  acontecen 
con  bastante  frecuencia,  no  estará  de  mas  manifestar  algu- 
nos medios  para  evitar  con  facilidad  sos  efectos  dr  sagrada* 
bles. 

En  el  momento  de  quemarse  se  debe  aplicar  á  la  parte 
algodón  en  rama;  si  la  quemad  ara  f  aere  de  hierro,  es  bueno 
dar  con  un  poco  de  miel.  Lo  mas  probado  es  ponerse  anee 
hilas  empapadas  con  la  disolución  de  alumbre  con  agua,  re- 
mojándolas de  cuando  en  cuando.  Cuando  la  quemadura 
es  por  una  llamarada,  se  bate  clara  de  huero  con  aceite  y  se 
da  á  la  parte  dañada  con  una  pluma  fina,  renovando  la  apli- 
cación siempre  que  se  seque  este  linimento. 

Para  destruir  la  grande  irritación  que  ocasiona  el  contac- 
to del  fuego  en  la  economía  anima?,  tal  ves  lo  mejor  que 
puede  aplicarse  es  un  emplasto  de  papas  cmdas,  bien  ma- 
chacadas 6  ralladas;  aplicándolas  bien  y  con  tiempo,  no  sé 
producirá  inflamación  y  cesarán  los  dolores»  aun  cuando  la 
quemadura  sea  causada  por  la  combustión  del  fósforo,  que 
es  de  las  peores  que  pueden  aoontecer.  En  defecto  de  las 
papas,  surte  muy  buen  efecto  un  pedazo  de  chocolate  mas- 
ticado 6  lienzos  mojados  con  e*ter,  rom,  espíritu  de  vino  6 
de  aguardiente. 

Si  la  quemadura  fuese  en  parte  muy  visible  y  se  quieren 
evitar  las  cicatrices,  se  le  lavará  la  llaga  con  agua  de  llantén. 
2,190.  Envenenamiento. — Muy  conveniente  sería,  que  to- 
dos conociesen  bien  á  fondo  el  modo  de  curar  un  envenena- 
miento  por  no  aguardar,  como  se  hace  siempre,  á  qne  venga 
el  médico,  pues  son  tan  rápidos  los  malos  efectos  del  vene- 
no, que  cuando  llega  aquel  ya  no  hay  remedio.  En  el  entre 
tanto  debe  prepararse  el  envenenado  tragando  cantidad 


271 

proporcionada  á  sus  fueras  de  agua  caliento  ó  fría,  azuca- 
rada ó  no.  Una  gran  cantidad  de  leche  pura,  tibia,  es  tam- 
bién útil.  La  clara  de  huevo  ó  la  gelatina  de  carne  disuelta 
en  agua  suelen  bastar  ínterin  se  suministran  socorros  mas 
eficaces.  Debe  tomarse  también  un  vaso  de  aceite  para  que 
bañe  las  paredes  del  estómago  y  del  exófago  para  preser- 
varlas del  contacto  del  veneno  al  tiempo  del  vómito. 

Podrá  fundarse  una  presunción  de  envenenamiento  siem- 
pre que  una  persona  que  disfrute  de  buena  salud  ó  ligera- 
mente indispuesta  experimente  de  repente,  después  de  ha- 
ber comido  ó  bebido  un  alimento  cualquiera,  un  ataque  de 
vivos  dolores  en  el  vientre,  frecuentes  vómitos,  cursos  abun- 
dantes, síncopes,  espasmos,  movimientos  convulsivos  ó  con- 
vulsiones intensas,  especialmente  cuando  estos  síntomas  per- 
sistiesen con  tenacidad  durante  muchas  horas  ó  muchos  días, 

2,131.  Cortaduras. — Una  cortadura  ligera  se  cura  pron- 
tamente teniéndola  ai  abrigo  del  aire  y  de  todo  ludimento 
que  pudiera  oponerse  á  su  reunión.  Esto  se  consigue  apli- 
cando simplemente  una  pequeña  compresa  empapada  en 
agua  y  vino,  mantenida  con  una  venda. 

Si  la  herida  os  profunda,  se  dejará  salir  la  sangre  por  al- 
gunos momentos;  conviene  comprimirla  suavemente  para 
que  salgan  los  cua jaronas;  entonces,  exprimida  la  llaga  y 
muy  limpia,  se  juntan  los  labios  de  la  herida,  y  se  la  man- 
tiene en  esta  posición  con  las  compresas  pequeñas,  puestas 
á  lo  largo  de  cada  uno  dé  los  mismos  labios  y  bien  sosteni- 
das por  muchas  vueltas  de  vendaje,  se  humedece  la  com- 
presa con  un  poco  do  agua  y  vino.  Es  menester  huir  de  los 
aceites  y  de  los  cuerpos  crasos  y  también  de  los  espirituosos. 

2,132»  Desottamiento  de  las  piernas. — Es  muy  funestados- 


2M 

cuidar  Im  desolladuras  que  se  hacen  en  las  piernas;  el  re- 
medio siguiente  está  experimentado  y  te  reputa  de  infalible. 
Póngate  papel  quemado  sobre  1a  deaolladara  reciente,  y 
déjesela  así  basta  qne  por  ana  perfecta  curación  w  caiga 
por  ai  mismo  el  papel  quemado. 

2,123.  Medio$  praer  rafúms  del  eSUnt  morho  — Abstinencia 
de  todo  alimento  qne  contribuya  á  promover  la  diarrea,  abe* 
tinenoia  de  fratás  de  todas  clases,  aun  cnando  estln  madd* 
ras  6  en  compotas,  lo  mismo  que.  secas.  Los  artículos  mat 
sanos  de  los  alimentos  vegetales  son :  pan  bien  cocido  y  de 
un  dia  para  otro,  arros,  harina  de  muís  y  panas  sanas.  To- 
da clase  de  encurtidos  es  muy  perjudicial.  Una  multitud  de 
alimentos  que  en  tiempos  ordinarios  son  saludables  y  con- 
Tenientes  á  la  constitución  de  un  individuo,  pueden  ser  al- 
tamente daftosos  en  tiempo  de  colera. 

La  dieta  6  alimentos  deben  ser  solidos  con  preferencia  á 
líquidos,  y  aquellas  personas  que  puedan,  deben  esoojer  la 
dieta  animal,  que  es  la  que  proporciona  un  alimento  mas 
concentrado  y  rigoroso,  evitando  carnes  saladas  y  ahuma- 
das, puerco,  pescados  salados  y  en  concha,  cidra,  limonada, 
naranja,  bebidas  acidas  de  toda  especie  y  licores  fuertes* 
Deberá  usarse  una  gran  moderación  tanto  en  la  comida  co- 
mo en  la  bebida  durante  la  permanencia  de  la  epidemia. 
Un  acto  solo  de  indiscreción  ha  producido  en  muchos  casos 
un  ataqué  repentino  y  fatal.  El  intervalo  entre  las  comidas 
no  debe  ser  largo,  porque  .se  ha  observado  que  el  colera  ad- 
quiere un  carácter  aun  mas  fatal  en  las  naciones  de  Oriente 
y  en  aquellos  países  de  Europa  donde  en  ciertas  épocas  de! 
afio  se  observan  por  sus  habitantes  largos  v  continuados 
ayunos.   Es  una  dieta  rigurosa  y  sustancial  eí  mejor  y  mas 


273 

sogurofpreaervativo  del  cólera.  El  cólera  tanto  como  la  hi- 
drofobia, es  hasta  ahora  el  oprobia  de  la  ciencia  médica,  y 
muchas  son  las  dudas  que  aun  existen  á  pesar  de  cuanto  se 
diga  acerca  de  si  esta  epidemia  es  ó  no  contagiosa. 

En'  ningún  caso,  á  menos  que  un  módico  no  lo  ordene, 
deberá  persona  alguna  emplear  purgantes  fríos,  tales  como 
las  sales  de  Glauver,  la  sal  de  Epsom,  los  polvos  de  Seidlitz, 
que  tomados  en  tales  circunstancias  pueden  producir  un 
efecto  muy  dañoso.  También  es  menester  proscribir  los  pur- 
gantes drásticos,  tales  como  el  sen,  la  ooloquintida,  el  áloe, 
etc. 

En  consecuencia  de  la  conexión  inmediata  entre  el  cutis 
exterior  y  la  membrana  interna  del  vientre,  es  de  la  mayor 
importancia  el  conservar  esta  parte  del  cuorpo  bien  abriga- 
da. Se  aconseja  el  uso  de  la  franela  sobre  el  cutis  para  con- 
servar el  calor,  ó  al  menos  es  muy  útil  llevar  una  franja  de 
franela  al  rededor  del  estómago.  Es  menester  cuidar  ds  te- 
ner los  pies  calientes  y  secos,  y  mudarse  los  vestidos  en  caso 
de  haberse  mojado.  Las  habitaciones  y  cuartos  dé  dormir 
deben  estar  bien  ventilados,  secos  y  abrigados. 

Si  á  pesar  de  estas  precauciones,  cualquiera  es  acometido 
repentinamente  por  el  frío,  mareo,  si  tiene  náuseas,  vómitos 
y  calambres,  en  ocasión  en  que  no  se  pueda  obtener  inme- 
diatamente ayuda  módica,  es  preciso  situar  al  paciente  en 
una  cama  bien  abrigada,  y  traer  calor  por  medio  de  aplica- 
ción á  los  pies  y  á  lo  largo  del  espinazo,  de  franelas  calien- 
tes, ó  botellas  de  agua  hirviendo  ó  sacos  de  flores  de  cále- 
melo, arena,  afrecho  ó  sal  bien  calientes.  Es  preciso  tam- 
bién frotar  bien  las  extremidades  del  cuerpo,  y  aplicar  una 


.260 

cataplasma  da  mostaza  y  vinagre  en  la  región  estomacal  du- 
rante quinos  ó  veinte  minutos. 

Cada  media  hora  se  le  administrará  una  cucharada,  pe- 
queña del  tamaüo  de  las  de  te*,  de  sal  volátil  en  un  poco  de 
agua  caliente,  ó  una  cucharada  de  mayor  tamaño  de  aguar- 
diente en  un  poco  de  agua,  ó  una  copa  de  vino  de  Jerea 
bien  caliente;  en  suma  se  hará  todo  aquello  que  sea  practi- 
cable para  atraer  y  conservar  el  calor  y  un  sudor  general  en 
tanto  que  se  obtiene  la  ayuda  de  uu  médico,  cuya  presencia 
en  estos  casos  es  indispensable.  Las  causas  principales  de 
toda  epidemia  j  particularmente  del  cólera,  son  la  humedad 
y  el  desaseo,  la  putrefacción,  las  materias  vegetales  ó 
animales  en  estado  de  descomposición,  y  en  general  todo 
aquello  que  pueda  viciar  la  pureas  del  aire;  causas  que  de- 
bilitan el  vigor  del  cuerpo  y  aumentan  la  susceptibilidad  de 
contraer  la  enfermedad,  sobre  todo  en  las  personas  jóvenes, 
ancianas  ó  débiles.  Se  ha  notado  que  los  ataques  del  cólera 
son  mas  frecuentes  en  los  distritos  bajos,  en  sitios  al  borde 
do  ríos  y  lagos,  y  generalmente  en  los  parajes  en  donde  hay 
grandes  montones  de  basura.  Contra  estas  causas  se  reco- 
mienda la  excesiva  limpieza  del  cuerpo  y  de  las  casas,  no 
conservar  en  ellas  gallinas  ni  ninguna  otra  dase  de  anima- 
les, ventilar  á  menudo  las  habitaciones,  haciendo  que  cir- 
cule por  ellas  el  aire,  y  sobre  todo,  impedir  la  reunión  de 
muchos  enfermos  en  un  mismo  punto. 


276 


MEDICAMENTOS 
que  pueden  prepararte  en  la  cata. 


2.134.  Tisanas.—  So  obtienen  por  infusión  6  por  decocción. 
Las  primeras  se  preparan  vertiendo  agua  hirviendo  encima 
de  las  sustancias  que  entran  en  su  composición,  6  echándo- 
las dentro'de  la  misma  "cuando  está  hirviendo,  apartando 
inmediatamente  la  vasija  del  fuego  y  tapándola  bien.  Las 
tisanas  que  deben  prepararse  por  este  método  son  las  que 
se  hacen  con  flores  ú  hojas  de  plantas,  cuyas  propiedades 
medicinales  se  alterarían  si  se  prolongase  la  ebullición. 

Por  decoscion;  es  la  que  se  prepara  con  palos,  raíces,  fru- 
tas y  semillas  que  necesitan  cocerse  mucho  mas  tiempo  pa- 
ra extraer  los  principios  fijos  que  contienen. — La  que  se  ha- 
ce con  solas  raíces  emolientes,  como  la  grama,  el  malvavis- 
co, bardana,  etc. ,  exige  menos  cocción. — Para  la  oompuesta, 
es  decir,  por  infusión  y  decocción,  se  cuecen  desde  luego  las 
sustancias  consistentes  y  duras,  agregando  en  seguida  las 
hojas,  flores,  etc.,  se  retira  inmediatamente  del  fuego  la  va- 
sija, se  tapa  bien,  y  un  cuarto  de  hora  después  se  cuela  por 
estameña  ó  un  lienzo  muy  tupido. 

2.135.  Cataplasmas. — Son  de  {res  clases,  emolientes,  ma- 
durativas y  resolutivas.  Las  primeras  se  preparan  desliendo 


376 

pooo  á  pooo  harina  de  linas»  en  agua  hirviendo,  meneándo- 
la sin  cesar  hasta  que  tenga  la  consistencia  de  una  papilla 
espesa.  Pueden  hacerse  también  con  miga  de  pan  blanco, 
con  arroz  muy  cocido,  con  papas  á  medio  oocer  y  despachur- 
radas, con  malvavisco,  aoelgas,  etc.,  que  deben  estar  muy 
cocidas.  Sea  como  quiera,  las  sustancias  que  se  emplean  pa- 
ra estas  cataplasmas  deben  aplicarse  muy  calientes  y  reno- 
varlas luego  que  comiencen  á  enfriarse.  Se  conservará  el  ca- 
lor mucho  mas  tiempo  cubriéndolas  con  un  hule  de  seda. 
Estas  mismas  cataplasmas  pueden  hacerse  madurativas,  in- 
corporándoles una  onza  de  ungüento  amarillo  y  otros  reso- 
lutivos, rodándolas  oon  algunas  gotas  de  extracto  de  Sa- 
turno. 

2,136.  Sinapi»moe,—Se  disponen  echando  agua  tibia  por 
enoima  de  harina  de  mostaza  reciente  hasta  formar  una  pa- 
pilla espesa;  se  extiende  sobre  un  lienzo  y  se  aplica  directa- 
mente á  la  parte  afecta,  para  que  produzca  una  rubicundez 
ó  encarnado  vivo  en  la  pieL  De  ningún  modo  se  hará  uso 
del  vinagre,  porque,  lejos  de  aumentar  la  fuerza  déla  mos- 
taza, la  debilita.  En  caso  urgente,  y  si  no  hubiese  mostaza 
amasando  harina  de  centeno  con  vinagre,  6  también  oon 
ajos  machacados.  Para  los  niños  se  hacen  rociando  uña  ca- 
taplasma de  harina  de  linaza  con  algunas  gotas  de  vinagre,- 
ó  también  polvoreándola  ligeramente  con  un  poco  dé  mos- 
taza. De  cualquier  modo  que  estén  preparados^  nunca  se 
levantarán  hasta  que  no  hayan  pasado  quince  6  veinte  mi- 
nutos desde  que  se  aplicaron. 

2,157.   Agua  de  cebada. — Después  de  haber  dado  tres  6. 
cuatro  hervores,  se  quita  el  agua  primero,  se  echa  otra  nue- 
va y  se  cuece  hasta  que  se  abre  el  grano.   Si  la  cebada  ea 


277 

perlada  no  hay  necesidad  de  mudar  el  agua.    Cuece  como 
la  otra,  y  después  se  cuela: 

2.138.  Horchata  de  almendras  dulces. — Desde  luego  se 
eohan  en  agua  hirviendo  para  pelarlas,  y  después  se  mue- 
len en  el  mortero,  rociándolas  con  algunas  gotas  de  agua, 
si  se  juzga  necesario. 

Añádase  á  la  pasta  -la  cantidad  suficiente  de  aquella,  ba- 
tiéndola bien  para  que  se  incorpore:  se  cuela  por  tamiz  y  se 
procede  en  seguida  según  se  ha  dicho. 

2.139.  Bálsamo  anodino.— -Tome**  una  onza  de  jabón 
blanco,  dos  dracmai  de  ¿pío  sin  preparar,  nueve  onzas  de 
espíritu  de  vino  rectificado;  téngase  á  un  fuego  lento  por 
tres  dias,  ouélese  el  licor  y  añádansele  tres  dracmas  de  alean- 

m 

for. 

Este  bálsamo  sirve  para  calmar  los  dolores,  y  es  muy  útil 
en  las  torcedoras  violentas  y  en  los  dolores  reumáticos,  cuan- 
do no  vienen  acompañados  de  inflamación;  ha  de  untarse 
con  la  mano  caliente  la  parte  dañada,  6  aplicarlo  un  pedazo 
de  lienzo  empapado  en  el  bálsamo,  y  renovarlo  cada  tres  ó 
cuatro  horas  hasta  que  se  quite  el  delor. 

2.140.  Vomitivo*. — Tómese  un  escrúpulo  de  hipecacuana 
en  polvo,  una  onza  de  agua,  una  dracma  de  jarabe  simple 
y  mézclese.  Los  que  necesiten  vomitivo  mas  fuerte,  pueden 
añadir  medio  grano  6  uno  de  tártaro  emético.  Los  que  no 
quieran  usar  los  polvos,  tomarán  diez  dracmas  de  vino  de 
hipecacuana  ó  media  onza  de  éste  en  igual-  cantidad  de  ja- 
rabe de  scilla  6  cebolla  albarrana. 

2.1 41.  Colirio  de  vitriolo.  — Media  dracma  de  vitriolo  blan- 
co y  seis  onzas  de  agua  de  rosas,  disuélvase  el  vitriolo  en 
el  agua  y  fíltrese  el  licor. 


278 

Este  colirio  suave  es  muy  útil  en  la  debilidad  dé  ¡os  ojo*  y 
en  la*  inflamaciones. 

2.142.  ifcifioe  aromdNa)*.  — Pueden  componerse  de  laurel, 
tomillo,  romero,  larpol,  mejorana,  orégano,  espliego,  salvia, 
albahaca,  alhelí  7  yerbabuena,  etc.  Se  hierren  y  se  pasa  la 
decocción  por  un  lienzo,  y  luego  se  le  añaden  unas  gotas  de 
aguardiente. 

Este  baño  es  excelente  para  curar  los  dolores  que  provie- 
nen de  una  extrema  frialdad  y  pera  favorecer  la  traspiración. 

2.143.  Baño»  de  p¡4*  calmantes.—  Hágase  hervir  en  una 
cantidad  bastante  de  agua  una  libra  de  salvado,  un  poco  de 
malvavisco,  dos  ó  tres  puñados  de  hoja  de  malva  y  otros 
Untos  de  parietaria.    En  este  baño  no  debe  estarse  mucho 

tiempo. 

2.144.  Polvos  estomacales.— Ocho  granos  de  quina  en  pol- 
vo, tres  granos  de  ruibarbo  en  polvo,  un  grano  de  etíope  de 
Lemery  y  un  grano  de  sal  amoniaco;  todo  mezclada 

Este  dosis  debe  tomarse  antes  de  comer  6  en  la  primera 
cucharada  de  sopa,  en  caso  de  debilidad  de  estómago. 

2,146.  Licor  par  a  fortificar  la  dentadura.— Tómense  cua- 
tro onzas  de  espíritu  de  vino,  cuatro  adarmes  de  guayacan 
y  dos  de  quina  en  polvo;  póngase  dentro  de  una  botella  bien 
topada,  meneándolo  dos  veces  al  dia.  A  los  ocho  se  pasa  por 
un  lienzo  fino,  y  puede  usarse  poniendo  diez  ó  doce  gotas 
en  medio  vaso  de  agua  templada  y  enjugándose  cuatro  ó 
cinco  veces  por  semana. 

2,146.  Agua  higiénica  para  la  boca. —Es  un  excelente  re- 
medio para  fortalecer  las  encías  y  o?  itar  los  dolores  de  la 
dentadura,  el  uso  diario  de  esto  agua.  Todas  las  mañanas  se 
lava  bien  la  boca  con  agua  clara  templada,  echando  en  ella 


279 

unas  gotas  de  agua  de  espliego.  Esta  agua  deshace  y  despe- 
ga las  serosidades  de  las  encías  y  de  las  glándulas  salivales. 

2.147.  Polvos  para  limpiar  la  dentadura. — Es  de  la  mayor 
importancia  cuidar  la  dentadura  con  esmero.  Los  diferen- 
tes polvos  que  se  usan  para  conservar  la  blancura  de  los 
dientes  suelen  ser  perjudiciales.  La  .ceniza  de  romero  que- 
mado, el  carbón  reducido  á  polvo  muy  fino  ó*  la  piedra  pó- 
mez lavada  y  porfirizada  son  preferibles. 

El  aseo  diario,  la  moderación  en  las  bebidas  ferméntales 
y  en  los  condimentos  salinos,  el  cuidado  en  preservarse  de 
las  variaciones  atmosféricas  y  el  abrigo,  son  los  medios 
mas  convenientes  para  conservar  la  dentadura. 

2.148.  Modo  de  aplicar  las  sanguijuelas. — Se  pondrán  las 
que  hayan  de  aplicarse  dentro  de  un  vaso  con  medio  dedo 
de  agua,  en  donde  se  tendrán  por  espacio  de  una  hora.  Se 
lava  la  parte  enferma  con  agua  tibia  azucarada:  entre  tanto 
se  colocan  las  sanguijuelas  en  un  lienzo  limpio,  y  cubiertas 
con  él,  se  pondrán  sobre  la  parte  donde  hayan  de  agarrar, 
procurando  comprimirlas,  sujetando  el  lienzo  para  que  no 
piquen  por  otro  lado.  Si  son  muchas  se  ponen  de  dos  ó*  mas 
veces.  El  método  mas  breve  y  mejor  es  meter  en  un  vaso  ó 
tubo  de  vidrio  roto  las  sanguijuelas,  y  aplicándole  á  la  par- 
te por  el  otro  lado,  se  van  comprimiendo  con  un  lienzo. 

Si  después  de  desprenderse  conviniese  la  evacuación  de 
sangre,  se  favorecerá  por  medio  de  lociones  de  agua  calien- 
te. Para  contener  la  rangre  y  cerrar  las  cisuras  se  les  cu- 
brirá con  yesca  de  chopo  ó  trapo,  y  luego  se  aplicará,  una 
cataplasma  de  miga  de  pan  y  leche,  que  se  repetirá  hasta 
que-  estén  las  cisuras  enteramente  cicatrizadas. 

2.149.  Aceite  eficaz  para  herida*. — Se  mezcla  una  libra  de 


280 

aceite  bueno  de  oliva*  con  una  de  azúcar  muy  bien  molida; 
ae  pone  la  mesóla  en  una  vasija,  ae  menea  bien  antea  de  po- 
nerla al  fuego,  que  al  principio  aera  suave.  Cuando  el  acu- 
car ae  haya  derretido  ae  aumenta  el  fuego,  procurando  no 
deje  de  hervir  ni  de  moverse  sin  cesar.  Cuando  quede  de  uu 
color  rojo  y  hecho  caramelo  es  señal  de  que  el  aceite  va  á 
au  punto,  y  solo  faltan  unce  dies  minutos  para  que  lo  esté*. 
Este  aceite  balsámico  es  efleas  para  todas  las  heridas,  y 
principalmente  para  las  recientes,  aplicándolo  lo  maa  calien- 
te que  ae  pueda  despuea  de  haber  lavado  la  herida  con  agua 
tibia,  y  embebiéndola  en  una  compresa,  que  ae  pone  enci- 
ma; no  es  menos  excelente  para  laa  contusiones  y  cortadu- 


2,160.  Tafetán  ingle*, — Tomóse  una  onza  de  cola  de  pes- 
cado y  dos  de  vinagre  cocido,  anadiándole  treinta  gotas  de 
esencia  de  clavo  de  especia;  se  pone  el  tafetán  bien  estirado 
y  clavado  en  una  tabla,  y  ae  pinta  por  tres  veces  con  la  mez- 
cla indicada. 

Ea  muy  bueno  este  tafetán  para  laa  cortaduras  y  heridas; 
ea  vulnerario  y  balsámico,  y  una  de  laa  principales  excelen- 
cias ea  el  adherirse  perfectamente  á  la  piel  y  ceder  á  sus  di- 
versos movimientos;  %para  aplicarlo  ae  moja  ligeramente. 

2,151.  Aguardiente  alcanforado.  —En  una  media  botella 
de  aguardiente  se  pone  un  pedazo  de  alcanfor  como  una  nuez 
y  se  deja;  al  cabo  de  algunos  diaa  el  alcanfor  ae  disuelve. 

Todo  el  mundo  conoce  el  uso  del  aguardiente  alcanforado 
en  •casos  de  caídas,  golpes,  contusiones, '  eta ,  etc.;  ae  aplica 
igualmente  en  friccionea,  y  algunas  Teces  por  medio  de  tra- 
pos empapadoa  de  dicho  aguardiente.  ^ 

2,162.  Fomento  moliente. — Batos  fomentos  ae  reducen  al 


281 

agua»  de  malvas,  malvavisco,  linaza,  etc. ,  etc.  Se  usan  ttftt* 
cialmente  criando  hay  irritación  6  inflamación 
*  2,153.   Fomento  calmante.  —Se  compone  ele  nn  cooimien* 
to  de  dulcamara,  beleño,  etc. ,  y  en  cantidad  de  un  puñado  de 
cualquiera  de  dichas  plantas  oti  uno  ó1  dos  cuartillos  de  agua* 

Se  aplican  trapos  empapados  en  este  cocimiento,  en  las* 
partes  que  hay  dolor,  especialmente  si  este  es  nervioso. 

2, 154.  Fomento  contra  tos  saha&one*  no  lacerados — Cabrán* 
se  las  partes  en  que  se  presenten  los  sabañones  con  trapos 
empapados  en  agua  común  tibia,  en  la  que  baya  en  disolu- 
ción un  puñado  de  sal  comnn  por  cuartillo  de  agua 

2,115.  Gargarismo  dnlri ficante. — Háganse  hervir  tres  6 
cuatro  higos  secos  en  medio  cuartillo  de  leche,  cuélese  y 
háganse  gárgaras. 

Üstá  muy  indicado  en  la*  anginas  inflamatorias. 

2.156.  Gargarismo  calmante — Háganse  hervir  en  una  libra 
de  agua  por  espacio  de  media  hora  dos  cabezas  de  adormi- 
deras; cuélese  y  añádase  un  poco  de  miel  blanca  6  de  jara* 
be  de  soma. 

2.157.  Gargarismo  aniiencorMtirír. — En  media  libra  dé 
agua  y  por  espacio  do  media  hora  téngase  en  infusión  urt 
puñadito  de  berros;  cuélese  y  añádanse  dos  6  tres  onzas  dé 
jarabe  de  quina. 

Este  gargarismo  está  mtíy  indicado  en  las  afecciones  eé' 
corbúticas  de  las  encías,  como  igualmente  en  las  aftaa,  en* 
fermedad  que  padecen  los  niños. 

2.158.  Bebida  pectoral — i!n  un  cuartillo  de  agua  hirvien- 
do, téngase  en  infusión  por  espacio  de  diez  6  doce  minutos 
una  pequeña  porción  de  flores  pectorales;  cuélese  y  añada4 
se  una  ó*  dos  onzas  de  jarabe  de  malvavisco. 


282 

8*  An  i  cucharadas  en  cato  de  catarro*,  especialmente  ai 
hay  toa  6*  irritación  en  el  pecho. 

9,169.  Bebida  contra  la*  lomhrice*. — En  un  cuartillo  de 
agua  hirviendo  tengase  en  infusión  por  espacio  de  an  cuar» 
to  de  hora  cuatro  6  cinco  cápenlas  de  tanaoeto  y  de  ajenjos; 
cuélese  y  añádase  una  6  dos  ontas  de  cualquier  jarabe. 

Se  da  también  á  cucharadas,  sobre  todo  por  la  mañana 
en  ayunas,  cuando  eifsta  algún  mal  cuyo  origen  sea  la  pre- 
sencia de  las  lombrices.  SI  Tino  de  ajenjos  es  igualmente 
bueno  para  semejantes  casos* 

2.160.  Laxativa  de  almidón. — Desliase  media  cucharada 
de  almidón  en  un  vaso  de  agua  caliente. 

Esta  lavativa  á  la  cual  se  añaden  algunas  veces  ocho  6 
dies  gutas  de  láudano,  conviene  en  las  disenterías  y  en  las 
diarreas  acompañadas  de  cólicos  y  dolores  intestinales. 

2.161.  Lavatiea  laxante. — En  un  vaso  de  agua  de  salva* 
do,  de  linasa,  de  malvavisco,  etc. ,  etc. ,  deslíase  una  ó*  dos 
cucharadas  de  miel. 

2.162.  Lavativa  purgante.  —Hágase  hervir  un  puñado  de 
hojas  de  sen  en  tres  cuartillos  de  agua  por  espacio  de  seis 
ú  ocho  minutos;  pasados  los  cuales  se  aparta  «1  puchero  del 
fuego,  y  se  añade  una  cucnarada  de  crémor  6  de  sal  de 
Epsono. 

2.163.  Linimento  emoliente. — Consiste  en  la  aplicación 
desaceite  de  almendras  dulces,  manteca  de  cacao,  enjundia 
de  gallina,  etc. ,  etc. 

2.164.  Linimento  calmante. — Tómese  una  onza  de  aceite 
común  6  de  almendras  dulces,  añádanse  algunas  gotas  de  láu- 
dano.   Se, usan  cuando  hay  dolor  nervioso  en  alguna  parte. 

2.165.  Linimento  paixt  la*  quemadura**— 8*  ponen  en  un 


2*3 

vaso  dos  cucharadas  de  aceite,  y  tres  6  cuatro  de  agua  dé 
cal;  se  mezclan  bien  y  se  agita  el  vaso  cada  ves  que  va  á 
usarse. 

La  espuma  jabonosa  que  se  presenta  en  la  parte  superior 
del  líquido,  se  aplica  con  muy  buen  ¿lito  en  las  quemadu- 
ras de  primer  grado. 

2.166.  Pomada  pata  las  escoriaciones. — Hágase  fundir  á 
calor  lento  en  una  caznelita  una  pequeña  cantidad  de  cent 
blanca  en  una  6  dos  onzas  de  aceite  de  almendras  dulces; 
déjese  enfriar,  y  póngase  en  un  bote. 

Esta  pomada  está  muy  indicada  contra  las  escoriaciones 
de  los  labios,  de  las  manos,  etc. 

2.167.  Pomada  anU-hetpÜiea. —Plores  de  azufre,  seis 
granos;  cerato  simple,  media  onza;  mézclese  bien. 

Se  toma  Una  pequeña  cantidad  como  una  nuez,  y  se  unta 
la  parte  enferma. 

2.168.  Otra. — Azufre  sublimado  medio  escrúpulo;  igual 
cantidad  de  calomelano;  manteca  sin  sal  media  onza. 

Se  usa  lo  mismo  que  la  anterior  pero  en  casos  mas  gra* 
ves. 

2,160.  Pomada  eoiUra  la  tifia. — fin  tres  6  cuatro  cucha- 
radas de  manteca  sin  sal,  mézclense  dos  cucharadas  de  ho- 
llín en  polvo  y  media  cucharada  de  sulfato  de  zinc. 

Se  dan  dos  fricciones  al  día  con  una  porción  como  una 
nuez  cada  vez  que  se  friccione. 

2.170.  Oirá. — Mézclense  dos  cucharadas  de  manteca  sin 
sal,  con  otras  dos  de  carbonato  de  sosa,  é  igual  cantidad  de 
cal  en  polvo. 

Se  usa  del  mismo  modo  que  la  anterior. 

2.171.  Oirá.  -—'Mézclense  cuatro  cucharadas  de  manteca 


/ 


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9M 

freteft  con  atoa  cucharada  de  polvo»  da  carbón,  otra  tanta 
cantidad  da  azufre  y  media  cucharada  de  hollín.       * 

Se  lava  bien  la  cabeza  con  agua  de  jabón,  le  unta  cada 
tree  días  la  parte  enferma,  tomando  una  porción  de  poma» 
da  del  tamaño  de  algo  mas  de  una  noel. 

2.172.  Polvos  contra  la  coqueluche; — Mézclete  nn  grano 
de  la  raíz  de  belladona  con  cuatro  6  cinco  granos  de  asacar 
d  polvo»  de  malvavisco. 

8e  pnede  dar  esta  dosis  una  ves  por  mañana  y  tarde  á  los 
niño»  qne  tensan  menos  de  un  año;  tres  veces  á  los  que  ten- 
tan  de  dos  i  tres  años;  y  hasta  cuatro  veces  i  los  que  suban 
de  esta  uitíma  edad. 

4.173.  Otro».— Mézclense  dos  granos  de  mis  de  bailado» 
hs,  cinco  granos  de  los  polvo»  de  Dower,  un  escrdpulo  de 
azufre  sublimado  y  medís  cucharada  de  asacar  blanca. 

Divídase  en  doce  papeles  para  dar  uno  cada  dos  horas. 

2.174.  Afufara  «mira  la  eoqnelnthe. — Mézclense  tres  on» 
zas  de  jarabe  de  ipecacuana  con  una  onsa  del  de  adormi- 
deras. 

8e  dará  una  cncharsdita  de  café  todas  las  mañanas  mien- 
tras dore  la  enfermedad. 

2.175.  Ungüento  conira  la«  almorrana*. -«--Mézclense  do* 
cucharadas  de  manteca  sin  sal  con  una  cuarta  parte  de  cu- 
charada de  polvos  de  asalta*. 

Se  toma  una  pequeña  porción  de  este  ungüento,  y  se  apli- 
ra  por  mañana  y  tarde  en  el  sitio  del  mal. 

2.176.  Linimento  para  calmar  tai  dolores  hemorroidales. — 
Mézclense  dos  yemas  de  huevo  con  cuatro  cucharadas  de. 
uneüento  de  popnleon. 

Se  unta  la  parte  con  una  porción  del  grosor  de  una  toues. 


285 

2.177.  Bebida  antiespasmódica.—A.guA  de  azahar  6  de  ti- 
la, dos  onzas;  jarabe  de  cortesa  de  cidra,  media  ótica. 

Se  da  á  cuoharaditas. 

2.178.  Bebida  colmante. — Agua  de  azahar,  doa  onzas;  tin- 
tura de  castores,  medio  escrúpulo;  jarabe  de  cidra,  media 
onza. 

Se  da  como  la  anterior  cuando  se  quiere  obtener  el  efec- 
to calmante. 

2.179.  Remedio  para  curar  las  tercedura*  de  pié. — Se  toma 
levadura  en  cantidad  suficiente  para  rodear  la  parte  dolorida. 
Se  amasa  esta  levadura  con  vinagre  y  se  satura  fuertemen- 
te la  masa  con  alumbre  pulverizado.  Aplícase  esta  pasta  so- 
bre la  tercedura  y  se  la  deja  secar.  £1  alivio  es  instantáneo 
y  la  cura  se  produce  en  seis  horas. 

Para  una  torcedura  ya  antigua,  habrá  que  renovar  la  pre- 
paración dos  6  tres  veces;  pero  dejándola  cada  vez  seis  ho- 
ras sin  tocarla. 

2.180.  .  Remedios  para  los  dolores  de  muelos.— Tómese  en 
buchadas  aguardiente  fuerte  templado*  inclinándolo  al  lado 
del  diente  6  muela  que  padece,  y  si  no  se  mitigase  el  dolor, 
puede  usarse  también  vinagre  templado. 

2.181.  Otro.— Se  pone  á  cocer  un  pufiado  de  hojas  de 
malvas  y  cuatro  cabezas  de  adormideras  blancas,  y  luego 
que  hayan  dado  dos  6  tres  hervores  se  aparta,  pudiendo 
usarse  como  el  anterior. 

2.182.  Otro. — Se  toman  seis  draomas  de  raíces  de  tormén- 
tila  y  una  de  pelitre,  poniéndolo  á  cocer  en  un  cuartillo  de 
vino  blanco,  apartándolo  y  dejándolo  enfriar;  se  usa  cómo 
las  anteriores. 

2.183.  Otro. — En  un  cuartillo  de  vino  blanco  se  ponen  á 

UL  OOOmKi  FOBLAHA. — TOlC   Tí — 19. 


eooer  un  poco  de  ruda,  perejil  y  ortiga*  6 
luego  que  bey»  cocido  on  poco  te  use  templado. 

2,134.   Otro. — Póngase  en  la  cavidad  de  la  macla  ó  dieav 
te  cariado  anea  hila*  mojada*  en  aceite  común  templado. 


M 


iscelXnea. 


2,186.  Para  bamUar  Um  jrisot  de  la*  aoVíonon**.— Seafl 
loa  eueloe  de  la*  habitaciones  de  madera  ¿'ladrillo,  ae  bar- 
ren perfectamente  y  se  lea  paea  una  rodilla  6  trapo  grueso. 
En  seguida  ae  pintan  con  una  brocha  mojada  en  aceite  de 
petróleo,  bernia  común,  trementina,  mezclando  bermellón, 
ocre,  cardenillo,  etc. ,  ó  el  color  que  ae  quiera.  Luego  que 
esté  bien  aeeo,  ae  frota  el  piso  con  un  oepQlo. 

Para/ dar.  el  color  rojo  ae  toma  como  una  libra  y  media 
de  cola  de  Fiando*  y  ae  hace  disolver  al  fuego  en  doce  cuar- 
tillo* de  agua;  pásese  por  un  lienao  y  deslíanse  en  esta  di- 
solución seis  libras  de  rojo  de  Prusia  ó'de^almaxarron^fino; 
se  pone  al  fuego  y  cuando  está  muy  caliente  se  aplica  á  los 
ladrillos  con  un  trapito;  se  deja  secar  y  se  dá  otra  mano* 


287 

Después  se  prepara  el  encáustico,  echando  doce  onzas  de 
cera  en  una  cazuela  con  tres  cuartillos  de  agua;  se  hace  her- 
vir todo,  y  se  añaden  poco  á  poco  cuatro  onzas  de  potasa 
disnelta,  revolviéndolo  con  una  cuchara  de  madera.  Cuando 
está  frío  se  extiende  sobre  los  ladrillos  con  un  pincel  grue- 
so, cuidando  no  frotar  mas  que  dos  veces  sobre  un  mismo 
paraje;  antes  que  se  seque  enteramente  se  frota  con  un  ce- 
pillo de  suela. 

2.186.  Pintura  para  los  ladrillo** — Se  ponen  á  cocer  seis 
cuartillos  de  aceite  de  linaza  con  doce  cabezas  de  ajo  ma- 
chacado. Guando  ha  hervido  bien  se  cuela  y  se  le  mezcla 
una  cuarta  de  azarcón  y  dos  onzas  de  sal  plomo.  Se  pone 
de  nuevo  á  la  lumbre  á  que  hierva  otra  Ves  y  con  una  bro- 
cha se  pintan  los  ladrillos,  que  se  preparan  antes  con  agua 
de  cola,  y  cuando  está  seco  se  le  da  la  mano  de  pintura. 

2.187.  Modo  de  limpiar  los  guantes  sin  mojarlos. — Se  to- 
ma miga  de  pan  y  polvos  de  huesos  muy  quemados,  y  se 
restregan  con  ellos  los  guantes;  se  frotan  después  con  una 
franela  impregnada  de  polvo  de  alumbre  y  tierra  de  quitar 
manchas  y  quedarán  perfectamente  limpios. 

2.188.  Para  grabar  sobre  >X  cristal.  —Este  procedimiento 
es  muy  sencillo;  se  bañan  los  cristales  6  vasos  con  cera  fun- 
dida y  se  dibuja  lo  que  se  quiera  con  un  buril  muy  agudo, 
penetrando  toda  la  cera  hasta  que  llegue  al  cristal;  luego 
se  moja  el  dibujo  con  ácido  fludórioo  6  con  ácido  apático  y 
se  pone  al  sol,  y  queda  hecho  el  grabado. 

2.189.  Aguapara  limpiar  y  hermosear  el  cutís. — Pónganse 
á  hervir  en  vino  blanco  hojas  de  rosas  y  flores  de  romero  y 
frótese  el  oútis.  Esta  composición  es  buena  también  para 
enjuagarse  la  boca. 


agua  fresca  de  poso,  lavándose  con  ella  1*  caí*  por  ia 
noche,  es  muy  recomendable,  como  aaí  mismo  el  agua  de 
pimpinela. 

2.190.  .Receta  para  hacer  crecer  y  nacer  nuno  d  pelo. — Té- 
mese ana  onaa  de  tuétano  de  buey,  otra  de  grasa  fresca  de 
puerco;  háganse  hervir  ambas  coatí  en  un  puchero  dé  tierra 
nuevo;  cuélese  esto,  y  en  seguida  échese  por  encima  una 
onsa  de  aceite  de  avellanas;  esta  pomada  hace  crecer  y  na* 
cer  de  nuevo  el  cabello. 

2.191.  Pomada  para  hacer  crecer  el  pelo.  —Manteca  de 
gallina,  aceite  de  flor  de  cálamo  y  miel;  todo  se  cuece,  y 
de  ello  se  hace  una  pasta. 

2,191.  Pora  tefttr  de  negro  fino  ti  cabello.—  Hágase  hervir 
durante  una  hora  un  cuartillo  y  medio  de  agua,  nna  onsa 
de  mena  de  plomo,  y  otra  de  viruta  de  madera  de  ébano; 
añádanse  dos  dracmas  de  alcanfor,  lávense  los  cabellos  con 
esta  tintura,  y  tomarán  un  negrí  hermoso. 

2,193.  Para  teñir  el  pelo  de  negro. —Se  echa  espíritu  de 
nitro  sobre  limaduras  de  plata  y  se  pone  en  el  baño  de  are* 
na  en  una  retorta,  añadiendo  agua  griega  y  filtrándola 

2,194  Agua  de  lo*  ángeles.  —Poniendo  en  infusión  las  flo- 
res del  mirto  y  destilándolas,  se  obtiene  agua  astringen* 
te,  llamado  agua  de  los  ángeles,  muy  apreciada  por  su  exce- 
lente olor.  La  experiencia  ha  demostrado  que  es  muy  á  pro- 
posito para  mantener  la  piel  fresca,  afirmar  y  perfumar  el 
cutis.  El  mirto  de  hojas  minada*  produce  mucho  menos  olor 
que  el  mirto  simple  de  los  jardines;  sin  embargo,  alguna» 
veces  hay  que  emplear  la  flor  del  mirto  llamado  romano,  y 
la  del  mirto  de  flores  dobles. 

2,125.  Agua  de  Colonia. — Para  preparar,  esta  sgua  se  to~ 


289 

• 

man  cinoo  cuartillos  de  espíritu  de  vino  á  treinta  grados, 
cuatro  onzas  de  esencia  de  bergamota,  una  onza  de  esencia 
de  toronja,  una  onza  de  flores  de  limón,  dos  dracmas  de  flo- 
res de  espliego,  dos  de  esencia  de  menta,  otro  tanto  de  ro- 
mero, una  de  esencia  de  clavo,  una  de  esencia  de  tomillo 
y  una  onza  de  aceite  esencial  de  naranja.  Se  ponen  todas 
estas  sustancias  en  una  redoma  grande,  y  se  agita  muchas 
veces.  Cuando  se  emplea  buen  espíritu  de  vino  y  esencias 
finas,  resulta  una  excelente  agua  de  Colonia. 

Muchos  perfumistas  se  limitan  á  mezclar  las  esencias  con 
el  espíritu  de  vino;  pero  cuando  se  quiere  dar  á  esta  agua 
un  grado  superior  de  perfección,  es  preciso  destilarla  en  ba- 
ño de  M&ia.  El  agua  de  Colonia  se  usa  generalmente  para 
el  tocador,  y  también  para  enjuagarse  la  boca  y  neutralizar 
su  mal  olor. 

2.196.  Agua  de  la*  sultanas. — Para  hacer  esta  agua  se  to- 
man tres  cuartillos  de  espíritu  de  vino  rectificado,  se  les  echa 
dos  onzas  de  tintura  de  vainilla,  una  onza  de  espíritu  de  bál- 
samo del  Pera,  una  de  espíritu  de  estoraque  líquido,  una 
de  bálsamo  de  Told,  un  cuartillo  de  agua  de  Chipre,  medio 
de  agua  de  junquillo,  é*  igual  cantidad  de  agua  de  jacinto  y 
otro  tanto  de  agua  de  resedá:  se  añadirá  medio  cuartillo  de 
agua  de  rosa,  otro  medio  de  agua  de  flor  de  naranja,  media 
onza  de  esencia  de  almizcle  y  otra  media  de  esencia  de  ám- 
bar. Se  mezclará  todo  junto,  y  resultará  un  agua  perfecta- 
mente aromática,  la  cual  se  emplea  para  blanquear  el  rostro, 
echando  algunas  gotas  en  un  vaso  de  agua. 

2.197.  Pomada  para  dar  lustre  al  cutis, — Jugo  de  limón 
se  mezcla  con  clara  de  huevo  y  se  pone  al  fuego;  se  menea 


390 

incesantemente  hasta  que  se  tace  manteca,  y  luego  te  le 
añaden  olores. 

2.198.  Otra. — Dos  onsas  de  espirita  de  Tino,  una  de  san- 
dáraca y  media  de  benjuí;  se  mesóla»  se  lava  la  cara  con  agua 
y  después  se  unta  con  esta  mésela. 

2.199.  Poeta  económica  para  Manquear  las  asonó*, — Cue- 
zanse bien  pepas  de  las  mas  blancas  y  harinosas  con  agua 
de  salvado,  se  mondan  y  desmenuzan  basta  formar  una  pas- 
ta con  leche.  La  miga  de  pan  es  también  muy  buena.  Para 
quitar  la  tinta  ú*  orin  de  las  manos  se  restregan  con  sumo 
de  limón  6  sal  de  acederas. 

2.200.  Aceite  cotmético. — Ouatro  onsas  de  aceite  de  al- 
mendras dulces,  dos  de  aceite  de  tártaro  debilitado,  dos  go- 
tas de  aceite  de  palo  de  rosa  y  una  onsa  de  aceite  de  jazmín 
6  de  rosa;  se  mezcla  todo,  meneándolo  unas  cuantas  veces. 
Es  un  coame*tioo  excelente  para  suavizar  el  cátis. 

2.201.  Leche  de  roea. — Ouatro  onsas  de  potasa,  cuatro  de 
agua  de  rosas,  dos  de  aguardiente  y  dos  de  sumo  de  limón; 
mézclese  todo  con  un  azumbre  de  agua.  Se  echan  dos  cucha- 
radas de  esta  composición  en  el  agua  para  layarse,  y  conser- 
ts  fresco  y  susto  el  cutis. 

2.202.  Para  perfumar  la  ropa.  — Se  recojen  flores  odorí- 
feras y  después  de  secarlas  á  la  sombra,  se  les  echa  polvo  de 
núes  moscada  y  clavillos.  Se  hace  una  boiaita  de  tafetán, 
se  llena  con  ella  y  se  mete  entre  la  ropa. 

*2,203.  PaetiÜae  aromática*. — Estas  pastillas,  de  un  olor 
muy  agradable  para  perfumar  las  habitaciones  y  preservar 
de  polilla  toda  especie  de  vestidos,  están  preparadas  por  un 
proceder  particular  y  dotadas  de  virtudes  soberanas  contra 
toda  clase  de  enfermedades,  y  sobre  todo  para  los  nervios; 


291 

el  olor  aromático  de  estas  pastillas  calma  la  fiebre  y  es  el 
mas  excelente  para  perfumar  la  habitación  de  un  enfermo 
y  muchas  veces  para  darle  alivio;  se  perfuman  con  estas  pas- 
tillas los  vestidos  para  preservarlos  de  la  polilla.  Su  compo- 
sición es  la  siguiente:  media  libra  de  cisco,  el  menos  pesa- 
do y  reducido  á  polvo,  una  onza  de  resina  ó  goma  en  polvo, 
una  dracma  de  cauela  en  polvo,  una  draoma  de  clavillo  en 
idem,  una  dramca  de  resina  (storax)  en  polvo,  dos  dracmas 
de  mirra,  una  onza  de  iris  de  Florencia  en  polvo,  media  on- 
za de  eoriandro,  media  onza  de  nitrato  dé  potasa,  dos  drac- 
mas de  sal  de  nitro  y  una  onza  de  goma  arábiga  en  polvo. 

Disuélvase  la  goma  en  medio  vaso  de  agua  y  hágase  de  to- 
do una  pasta;  divídasela  en  seguida  en  porcioncitas  á  mo- 
do de  pequeñas  pirámides,  dejándolas  secar  bien  antes  de 
usarse. 

Para  servirse  de  estas  pastillas  no  hay  mas  que  colocarlas 
donde  se  quiera  encenderlas,  por  la  punta  mas  delgada,  y 
dejarla  hasta  que  por  sí  misma  se  consuma. 

2,204.  Agua  balsámica  para  quitar  la*  arruga»  de  la  ca- 
ra.— Tómese  un  buen  puñado  de  cebada  y  póngase  al  fuego 
con  suficiente  cantidad  de  agua;  luego  ^ue  dé  un  hervor  se 
aparta  y  se  le  echa  agua  nueva;  cuando  ésta  también  haya 
hervido  se  pasa  por  un  lienzo  fino  y  se  le  añaden  algunas 
gotas  de  bálsamo  de  la  Meca;  se  agita  la  botella  bien  á  me- 
nudo por  diez  6  doce  minutos;  hasta  que  el  bálsamo  se  haya 
enteramente  incorporado  con  el  agua,  lo  que  se  conocerá 
cuando  está  un  poco  turbia  y  blanquizca. 

Esta  agua  es  maravillosa  para  blanquear  el  rostro  y  para 
conservarlo  en  su  juventud  y  frescura.  Con  una  sola  vez  al 
dia  que  se  use  dándose  con  ella,  quita  las  arrugas  y  da  á  la 


292 

tes  un  lustre  admirable.  Se  debe  tener  cuidado,  antea  de 
terrina  de  esta  agua,  de  lavarte  bien*  la  cara  con  agua  muy 
clara. 

*  2»206.  Agua  dé  olor. — Tómese  una  ona*  de  bejuf,  dos 
de  estoraque  y  un  poco-  de  raía  de  lirio  de  Florencia  en  pol- 
voree pone  en  infusión*  todo  en  cuatro  onsas  de  aguardiente 
por  ocho  horas  sobre  rescoldo;  después  se  pasa  el  licor  por 
un  lienzo  y  se  vuelve  á  echar  sobre  las  heces  cuatro  onsas 
de  aguardiente  para  tacar  otra  agua,  que  se  mécela  con  la 
primera;  las  heces  pueden  servir  para  hacer  pastillas. 

2.206.  Agua  dé  vioUla. — Tómete  una  libra  de  espíritu  de 
vino  rectificado  y  dos  onzas  de  lirio  de  Florencia;  se  deja 
en  infusión  por  doce  ó  quince  dias,  y  después  se  filtra  y 
guarda  la  tintura. 

2.207.  Agua  dé  rosa,  — En  una  cazuela  vidriada  se  pone 
agua  y  la  cantidad  de  hojas  de  rosas  frescas  que  se  juzgue 
conveniente;  échense  encima  dos  ó  tres  gotas  de  espíritu 
de  vitriolo,  las  que  bastarán  para  comunicar  el  olor  y  color 
de  la  rosa. 

2.208.  Polvos  para  limpiar  la»  dentadura*.— Tome**  me- 
dia onza  de  crémor;  azúcar  fina  y  hueso  de  jivia,  dos  drac- 
mas  de  lirios  de  Florencia  y  sangre  de  drago;  se  reduce  á 
polvos  y  se  mezcla,  frotándosela  dentadura  con  un  cepillo 
muy  fino. 

2.209.  Otros.— Media  onza  de  azúcar,  cascaras  de  huevo 
calcinadas,  y  coral  blanco  ó*  rojo;  se  muelen  reduciéndolo  á 
polvos,  frotándose  con  estos  polvos  como  con  los  anteriores. 

2.210.  Agua  para  fortificar  la»  dentadura*,  —Póngase  en 
cuatro  cuartillos  de  agua  dé  sal  amoniaco,  flor  de  romero, 
tomillo,  mejorana  y  espliego,  se  maja  muoho  y  pone  en  in- 


293 

fusión  por  espacio  de  cuarenta  y  ocho  horas,  pasándolo  des- 
pués por  un  lienzo  fino. 

2,oll.  Otra. — En  un  cuartillo  de  agua  pónganse  á  cocer 
unas  cuantas  hojas  de  salvia,  zumo  de  limón  6  vinagre  fuer- 
te, y  luego  que  haya  dado  unos  hervores  se  aparta,  tapáu- 
dolo  bien,  y  cuando  esté  frío  se  pasa  por  un  tamiz,  usándo- 
lo como  los  anteriores. 

2.212.  Espíritu  de  lavawia  sin  destilar. — Échese  una  gota 
6  dos  de  aceite  de  espliego  en  medio  cuartillo  de  agua  pura, 
y  agítese  en  un  una  botella  de  vidrio. 

2.213.  Compostura  dé  objetos  de  porcelana. — Se  toman  va- 
rias claras  de  huevo  y  se  les  bate  hasta  que  forman  espuma, 
desliendo  en  ellas  un  poco  de  cal  viva,  de  modo  que  todo 
forme  una  masa  algo  clara.  Se  extiende  de  esta  masa  con 
el  dedu  sobre  los  pedazos  rotos,  y  se  les  reúne  apretándolos 
fuertemente.  Cuando  la  masa  está  bien  seca,  puede  poner- 
se á  hervir  el  objeto  compuesto  en  una  cacerola  llena  de  le- 
che, para  que  desaparezcan  las  señales  de  la  rotura;  pero 
hay  que  tener  mucho  ouidado  de  sacarlo  antes  que  los  pe- 
dazos se  despeguen  con  el  calor.  En  este  caso  habrá  que 
empezar  de  nuevo  la  operación. 

2.214.  Receta  para  limpiar  la  plata.  —Después  de  haber- 
se servido  de  la  plata,  debe  lavarse  con  agua  hirviendo,  lue- 
go en  agua  solo  caliente,  y  por  último,  enjuagada  en  agua 
fría,  hecho  lo  cual  se  la  frota  con  un  pedazo  de  franela  6  ba- 
yeta. Si  se  descubren  algunas  manchas  que  hayan  resistido 
á  estas  tres  aguas,  hay  qué  hervir  la  plata  en  agua  y  ceniza, 
6  bien  frotarla  con  hollín  disuelto  en  alcohol. 

Para  devolver  á  la  plata  su  lustre  primitivo,  se  hace  una 
."nezcla  de  crema  de  tártaro,  de  alumbre  y  blanco  de  Espa- 


294 

fia,  (proto-carbonato  de  oaloio)pulverisados,  poniendo  igual 
cantidad  de  crema  de  tártaro  y  blanco  de  España,  pero  so- 
lo la  mitad  de  una  de -estas  dosis  de  alambre.  Se  disuelve 
esta  mesóla  en  agua,  y  se  osa  frotando  la  plata  con  en  cepi- 
llo muj  suave.  Se  le  enjuga  laego  con  agua  clara.  8e  le  se- 
ca con  on  pedazo  de  piel 

2,216.  Otra  recela  para  limpiar  ¡a  vajilla  de  piala. — Se 
toman  dos  cuartillos  de  agua  de  fuente,  dios  gramos  de  alum- 
bre y  veinticinco  gramos  de  ollin  de  chimenea.  Se  calien- 
tan estos  ingredientes,  y  se  moja  en  la  mistura  una  muñe- 
quilla  de  lana,  ó  bien  un  cepillo  suave,  en  el  cual  se  frota 
la  plata,  y  luego  se  le  saca  con  cuidado. 

2,216.  Recela  importante  para  lavar  Ion  vestidos  de  seda  de 
iodo»  colore». — Se  descose  el  vestido  y  se  marea  con  un  hi- 
lo al  derecho  de  la  tela.  Se  toman  ciento  veinticinco  gramos 
(un  cuarterón)  de  miel  de  abejas  ordinaria;  ciento  veinticin- 
co gramos  de  jabón  negro  y  un  onartillo  de  aguardiente  co- 
mún. Se  pone  todo  al  fuego  en  una  cacerola  hasta  qué  se 
derrita  la  mieL  Cuando  el  liquido  está  bien  homogéneo,  se 
le  echa  en  un  lebrillo  y  se  le  deja  enfriar.  Se  tienen  á  ma- 
no dos  barreños  llenos  de  agua  clara,  y  sobre  el  respaldo  de 
dos  sillas  de  cocina  se  ooloca  una  tabla  de  planchar,  ó*  bien 
se  emplea  una  mesa  de  madera  blanca,  que  esté*  bien  limpia. 

Sobre  esta  ó*  sobre  la  tabla  de  planchar  se  pone  un  paño 
del  vestido,  el  revé»  para  abajo;  se  toma  un  cepillo  de  ropa^ 
se  le  moja  en  el  líquido  que  oontiene  el  lebrillo,  de  manera 
que  solo  entren  en  el  liquido  las  extremidades  de  las  cer- 
das, y  se  cepilla  la  tela  á  lo  largo,  si  ésta  es  raso,  y  á  lo  lar- 
go y  á  lo  ancho,  si  el  vestido  que  se  trata  de  limpiar  es  de 
gro.  En  seguida  se  vuelve  la  tela  para  cepillarla  por  el  re- 


295 

vés  sin  volver  á  mojar  el  cepillo.  Se  escoje  el  borde  superior 
del  paño  oon  las  dos  manos,  teniéndola  con  la  punta  de  los 
dedos,  y  se  le  sumerge  varias  veces  en  el  agua  de  uno  de 
los  barreños,  después  de  lo  cual  se  deja  escurrir  bien  el  agua 
sobre  el  mismo  barreño  y  se  le  vuelve  á  empapar  muchas  ve- 
ces en  el  otro  barreño  lleno  de  agua  clara,  dejándole  luego 
escurrir.  Hecho  esto  se  le  pone  á  secar  en  una  cuerda.  Del 
mismo  modo  se  procede  con  los  demás  paños  y  con  las  pie- 
zas del  corpino.  A  medida  que  un  paño  no  escurre  ya  mas 
agua,  se  le  quita  de  la  cuerda,  se  le  dobla  una  vez  á  lo  an- 
cho y  se  le  coloca  en  un  paño  bien  limpio,  con  el  cual  se  le 
cubre'. 

Durante  estas  diversas  operaciones,  se  tiene  cuidado  de 
mandar  poner  las  planchas  al  fuego.  Si  el  vestido  que  se  tra- 
ta de  limpiar  es  de  raso,  se. planchan  los  diferentes  paños  y 
.piezas  por  el  reyes  y  se  dobla  cada  trozo  á  lo  ancho.  Si  el 
vestido  es  de  gro  liso,  se  le  plancha  al  derecho,  puesto  que 
éste  ha  de  ser  ahora  al  revés,  y  se  marcan  los  dobleces  á  lo 
ancho,  como  los  que  tienen  las  telas  en  pieza. 

Con  este  mismo  líquido,  y  del  mismo  modo,  se  lavan  las 
corbatas  de  hombre  y  de  señora,  y  todas  las  prendas  de  se- 
da sin  excepción. 

2.217.  Modo  de  limpiar  los  objetos  de  azabache. — El  uso 
universal  del  azabache  nos  impone  la  obligación  de  indicar 
aqui  un  método  muy  sencillo  para  limpiarlos  con  poco  cos- 
to. Este  método  se  reduce  al  empleo  de  la  miga  de  pan,  he- 
cha pedacitos,  que  se  introduce  en  las  curvas  6  huecos  del 
objeto  de  azabache;  se  le  frota  después  un  poco  y  se  limpia, 
finalmente,  con  un  pedaoito  de  franela  limpia. 

2.218.  Compostura  de  objetos  de  cristal. — Se  toma  espírí- 


396    . 

tu  de  riño  7  goma  arábiga  en  cantidad  suficiente  para  los 
objetos  que  se  quieran  oomponer.  La  goma  debe  ser  de  la 
mas  blanca  7  trasparente.  Se  pone  al  fuego  todo- junto  7  se 
le  dejs  hervir  hasta  que  la  goma  esté*  bien  derretida.  8e 
calientan  los  pedasos  rotos,  7  con  las  barbas  de  una  pluma 
se  le  unta  de  la  oomposioion  arriba  indicada.  Se  aprietan 
fuertemente  los  pedasos  unos  con  otros,  sujetándolos  hasta 
que  están  fríos. 


FIN  DI  LA  ÓSRA. 


1HBICI 


PARTE SE#1 

BUBA. 
aNa. 

COCINA  MUXIC 

pXoh. 

Mole  de  guajolote  .         <        ¿         ,        .         i        ,          & 

Otro  mole  de  guajolote    . 

4                       « 

0 

ti       ti        ii         tí          t         t         * 

•                       • 

7 

Mole  de  guajolote            < 

■ 

1 

Guajolote  en  mole  poblano     *        * 

4                  • 

8 

Mole  poblano  de  guajolote       < 

•                  i 

5 

fi    de  guajolote   . 

«                  i 

9 

ii    de  la  señora  Petronila     < 

'                  •                   < 

9 

ii    de  Kana  Chepa 

é                     i 

10 

<t    mulato                    4 

1               '      í                     1 

10 

íi    de  gallina  oaxaqueño 

4                     i 

10 

a    de  pollos.         .                 * 

• 

• 

10 

ri    de  chile  serrano              * 

í                     * 

11 

íi    de  menudo              *        * 

t                    t 

11 

n    de  chilpoole             * 

%                     • 

11 

M    de  pancita                       * 

• 

12 

n    prieto     .        .        <        .        , 

1 

12 

906 

Receta  del  mole  prieto    .  **■* 

Mole  de  almendra 

ii    tapatío   .»....■ 

M    de  papas. .13 

ii    de  tamalea              - 

•i    de  chile  patilla 

ii    de  chito  chicharrón «¿ 

ii    verde  de  gallina  ,. 

Otro  mole  verde      .■ • . 

Mole  amarillo la 

ti    chichilo ....        •                "       .  15 

ii    de  chilpoeo  6  chilpoeonti ,» 

u    campechano   .        ,        ,        ,        ,  ,. 

ii    de  ohilteptn  « 

Clemole •        .  l« 

ii     .de  guajolote .16 

Otro ,        %       *  . 

it    de  gallina ,ft 

».......::  17 

i»    de  cecina        .                         •        •        •        .  17 

ii    de  lomo  6  espinazo  de  cerdo   ....  17 

11    de  babillaa  de  ternera     *        •        ...  17 

11    de  menndo  de  ternera     *        ....  17 

Clemole  toluquefio Jft 

18 

«1       mexicano .18 

Mancha  manteles •  n 

11             11       del  arriero ja 

Otros  de  pobre jq 


m 


Mancha  manteles  »        *        ♦        «        » 

ii  ii  .         •        •        •        •        • 

ii  ii  »•»#»» 

ti  ii  ...... 

Otros .  • 

ii         ....».•» 

ii     de  pollos  ó  pichones      .        «        *        • 
ti         •        •»..«•* 
ii         ....«••• 

ti         .......        i 

ii         ....*»•* 

n      de  lomo  de  cerdo  .         .         •        .        » 
ii         ......... 

Pipían     ........ 

Otro  pipián     ....... 

ii         ........ 

Pipían •         .        • 

ii      verde 

ii 

Chiles  en  escabeche 

Otros  chiles  en  escabeche        .        .        .        . 

Nogada  para  chiles  con  jamón.        * 

m       .......         • 

1 1      para  chiles  rellenos 

Chiles  capones. 

Otros  chiles  capones 

Chiles  capones. * 

Rajas  de  chile.        ...... 

Chiles  rellenos 

ii      rellenos.        ...... 


800 

Chiles  rellenos  de  picadillo  28 

»      rellenos»        ••■••..  89 

Otros  chiles  rellenos  de  chícharos  y  acelga*     .  30 

Chiles  de  vigilia      .  30 

Rajas  de  chuchóte* 30 

Chile  verde     »•......  30 

w      poblano.        .......  31 

Tlatlaoyos  con  flor  de  calaba»        ....  31 

Chilpocles  en  vinagre      ......  31 

Otros  chilpocles  en  vinagre 31 

Modo  de  hacer  los  chiles  en  Vinagre  33 

Guisado  de  chiles  en  vinagre 32 

Tamales  .»».».        .         •        ,  33 

"       de  chile 33 

ti  *    de  cuajada.                 34 

11       de  huevo 34 

fl       de  elote 34 

Otros  tamales  de  elote    .  35 

Tamales  de  maíz  oacahuazentle  y  huevo  ...  36 

>r       comunes  6  cernido  de  maíz  común     •  36 
ti        de  dulce             .        .        .                          .36 

Otros  tamaies.                          . '       .                 .        ,  37 

Tamales  de  flor  de  calabaza     .....  37 

Tamal  de  cazuela  al  estilo  de  Veracruz    .        .  38 

Tamales  de  dulce .  -     .  39 

m        de  chilote           ......  39 

>»       blancos  .39 

»i        cernidos 39 

n        de  queso .40 

>f        de  chile     .......  40 


801 

vJU». 

Tamalea  de  hongos ,        •        •        •        •        •  40 

u       de  arroz     .        .              .  •        ...  41 

Otros  tamalea  de  arroz 41 

Adobo 42 

tt     blanco  ....*...  42 

ti     de  chilpocle  .        •        .  .        .        .42 

n     de  alverjones.        .        .        .        .                 •  42 

n      seco                        .        ....        .        .        •  42 

n     de  carne  de  puerco        .....  43 

n     de  chícharos 43 

ii     de  horno 43 

n     de  coliflor .43 

n     de  coles 44 

n    -de  chilpocle 44 

Adobillo 44 

n 44 

Otro  adobillo 44 

Pollos  mechados  y  adobados   .        .        .        .  45 

Cabrito  adobado     .......  .45 

Palpas  de  venado  mechadas  y  en  adobo  .        .  '45 

n     de  ternera  mechadas  y  adobadas  ...  46 

Otras  sin  mechas     .......  46 

Lomo  de  cerdo  adobado 46 

Otro 47 

Lengua  adobada 47 

Chanfaina  adobada,                                 *  .      .  47 

Otra ,  48 

Betabeles  y  zanahoria  en  adobe  48 

Calabacitas  en  adobo 48 

Bagre  adobado 28 

UL  OOOZMBBA  POBLANA.— TOX.  H,— 20. 


rlfla. 

Lomo  da  cardo  adobado 49 

Atado  do  guajolote  á  la  mexicana   ....  49 

Oteo  gnajoloto  aaadoá  la  mexicana.        ...  49 

Gallinas  on  Ghiobimeoo 60 

Ohilaquiles 50 

Ghilaquileren  rueda 00 

Otros  ohilaquiles 61 

Chanfaina 61 

it  ■•'     on  ajo  oomino 61 

ti 88 

Envueltos  do  ohilpoolo  nooo  rallónos  de  huevos  re- 
vueltos          62 

Envueltos  do  nana  Rosa 62 

Otros  envueltos 68 

TCimfril^M 63 

Tortillas  enohilariaa  llamadas  do  las  Cholos         '     *  53 

Bnohiladas  ilustradas      ....••  63 

Ohayotostlos  ........  54 

Otros  ehajoteetles 64 

Bajas  oon  huaro 64 

Hojotos  oon  queso 64 

Tinga  fpxondtloas  .......  65 

ti     poblana. 65 

Otra  tinga .,65 

Tinga 66 

ti     caliente.        9        ......  66 

ii     fría 56 

•i     da  chile  meoo. 66 

Bacalao  á  la  toloquofla  oon  chile  ancho   • 

ii       oostefio      ....... 


ríes. 

BARBACOA. 

Modo  de  prepararla. 57 

Advertencia 58 

Cochinita  en  barbacoa 58 

Borrachito 58 

Queaadillas 59 

Otras  quesadillas    .......  59 

Adoberas  de  queso  .......  60 

Entomatado 60 

Otro  entomatado 60 

Pesadumbre 50 

Garbanzos  en  aceite        ......  60 

Frijoles  guineos 61 

tt       Teracruzanos               ...                •        •  61 

Otros  fríjoles  veracrusmnos 61 

Frijoles  ilustrados 61 

h       corrientes 62 

Revoltijo .        .  62 

ti        con  camarones 62 

ti        de  la  Soledad    ......  62 

n       . 63 

Nopalitos        ........  63 

Nopales  navegantes 63 

ft        mexicanos.        ......  64 

tt        en  jitomate .94 

Quelites  fritos. 64 

Quiltoniles     . 64 

Cnayotes  rellenos 64 


ríos. 
Calabacita*  reOena*. 66 

Ayooote*  oompoeetoa" 65 

Cnitlaoochk 66 

Huaxmole 66 

Alwrjone* 66 

Verdolaga*  en  mole  de  chilpoole     ....  66 

Totopo*  de  ternera 66 

Totopoeole*  de  carne 67 

Molote*  de  carne .67 

Atole  coman 67 

»      de  leche 68 

Chilatole     .                68 

PULQUES  COMPUESTOS 

• 

Polque  de  apio 68 

n      oolorado 68 

n      de  anona 69 

rt      de  almendra 69 

Campechana  .  69 

Tepachi 70 

Ohicha 70 

PARTE  TERCERA. 

» 

PASTELERÍA. 

Advertencia .71 

Llamado  horno  ardiente .71 

.72 


305 

p1G6. 

Hórao  regular. .72 

tt      templado               . « * * 

it      suave ** 

ii      flojo 72 

Modo  de  preparar  la  pasta 72 

Masa  para  bollos 73 

ti    crocante  6  que  cruje  al  mascarla  73 

Pasta  para  masas    .                 74 

ii     para  empanadas,  flanes  y  tortas     ...  74 

Masa  de  empanadas 74 

ti    dura 74 

ti    en  hojas. 74 

ii    doblada 75 

Pasta  hojaldrada     ........  75 

ti     para  bollos,  pastelitos,  tortas,  etc.  76 

Pastel  caliente 76 

ii     frío 76 

ii     inglés  llamado  de  Liverpool        ...  77 

ti     de  tuétano '77 

Otro  pastel  de  carne 22 

Pastel  inglés  6  votaran  .                         .        •        •  78 

ii      de  mantequilla              78 

ii      de  mantequilla  con  carne      ....  79 

Otro 80 

ii    de  mantequilla 80 

Pastelón  de  almendra,  piñones  y  natillas.  81 

Pastel  de  harina              82 

82 

ii      americano 82 

Otros  pastelitos  de  mantequilla       ....  83 


ríos. 

Otra  mata  para  pastelón  ó  pastelitos       ...  89 

ti    mam  para  pártales 84 

Relleno  de  pollos  para  pastel  .  84 

Pastelón  de  vino     .......  84 

Masa  para  cubrir  un  pastel  85 

Relleno  para  un  pastel 86 

Pastel  de  yemas  cocidas  ; 86 

Otro  de  jemas  y  muís .87 

Pastel  de  garbanso 87 

ti      de  pifión                       .        .  87 

it      de  leche  j  hueros  hilados  87 

ti      de  masa  fina. 88 

Pastelón  de  requesón 88 

Masa  para  empanadas  6  pasteles     ....  88 

Empanadas 90 

Otras \        ...  91 

...  92 

92 


it 


> 


Empanadas  de  chuletas  de  carnero  á  la  perigord  92 

it         de  conejos  y  liebres      ....  98 

ii         de  oodorcines 98 

ii         de  huevo                                                 •  98 

Otras 93 

94 

Empanadas  frites 94 

ii         de  leche 98 

ii         de  riño.  96 

Otras 95 

Budín  ingles 96 

it      de  carne ®7 


807 

Píos. 

Budín  de  almendra 97 

ti      de  almendras 98 

ii      de  limón       ....         ...  96 

ii      de  bizcocho  de  velorio 99 

ti      del  rey 99 

m      de  mamón 99 

it          ..)••••••  w 

ti      de  naranja    ....«,.  100 

.i 100 

Otro  budin  de  naranja 100 

Plunipudin 100 

Budin  de  pechuga  de  bizcocho.        .        ,        .        .  101 

ii      de  requesón 101 

ti      de  pan  de  birote 101 

ii      de  bizcochos. 102 

ti      de  leche 102 

ii      cubano.         .......  102 

n      habanero 103 

n      de  mame)  colorado 108 

ii      de  maíz  seco 103 

Puding.                           104 

ii      de  pan 104 

Empanadas  de  pescados 104 

ii         de  carne        ......  104 

ii         de  plátano    .  105 

ii         de  San  Jerónimo 106 

ii            106 

Torta  de  calabazas 106 

ii     de  requesón 106 

Otra  torta  de  requesón 107 


FAQS. 

Torta  de  núes 107 

ti     de  natillas     .        ......  107 

•t     de  Moctezuma 107 

tt     de  chico  tapóle      ......  106 

i«     de  papas 106 

h     de  elote.        .......  106 

ii     de  coco  ».».%.».  106 

ti     de  ángeles     ........  109 

ti     de  gloria 109 

Otra  torta  de  gloría.        ......  109 

Torta  del  cielo                ......  109 

ii     de  almendra  .......  110 

n     de  almendras.        ......  110 

»     de  almendra .  110 

ii     de  maís. 11Q 

ti     de  pifia  de  los  rireyes    .  •       .  1H 

ii     de  atole 113 

ii     de  mantequilla,  huevo  y  bisoooho  .  112 

ti     de  damas       .......  113 

ti     de  leche  7  mamón ......  113 

11     de  arros.        .......  113 

Otra  torta  de  arros .  113 

Torta  de  arros. 113. 

11      »t       it  .        .         .        .        .        ...        .  U4 

w        n        i>   .....                     .  114 

11      11       it  .                •        •        •        •                .  114 

11    6  brioche  francés    ......  115 

11    del  cielo.        .     ' 115 

11    de  sémola                                                  ...  116 

Tortas  de  pan  con  manteca      .....  116 


909 

píos. 

Torta  de  almendras.                         •     ^\  116 

ii      de  papas        .                 116 

ii      de  miga  de  pan 117 

Frituras  ó*  rosetas 117 

n        ó  roseta  de  sartén 117 

Timbal  de  macarrones 117 

Otro  timbal  de  macarrones 118 

Buñuelos  de  arro2  .  118 

Otros  buñuelos  de  arroz 119 

Buñuelos  de  arroz "  119 

n        de  leche 120 

Otros  buñuelos  de  leche 120 

Buñuelos  de  leche 120 

ii        de  queso 120 

n        de  queso  fresco        .                 «  120 

Otros  de  queso 121 

Buñuelitos  de  maíz. 121 

Buñuelos  de  maíz 121 

Otros  buñuelos  de  maíz 121 

Buñuelos  de  viento 122 

Otros  buñuelos  de  viento 122 

Buñuelos  de  viento  de  atole 123 

Otros  de  viente 123 

Otros  buñuelos  de  viento. 123 

Buñuelos  de  viento.         .  » 124 

Otros  de  viento 124 

Buñuelos  de  viento 124 

Otros  de  viento 126 

Buñuelos  de  manzana,  ohabacanosó*  duraznos  .  126 

«        de  harina  esponjados        ....  126 
la  oooiNB&a  pojhjju.— ton.  n.— 80}.  . 


S10 


tías. 

Buñuelos  de  mantequilla. 126 

tt           ir            ff             • 

126 

ir       de  reoorte 

0 

126 

ii                      •        • 

• 

126 

Otros                              * 

>  •      < 

127 

»    buñuelos 

127 

Buñuelos       .... 

127 

it        de  camote 

127 

it        ojalando* 

127 

tt              .... 

123 

tt        de  calaba» 

128 

n        de  jeringa 

128 

Otros  de  jeringa 

128 

tt     de  jeringa 

129 

Buñuelos  de  almidón 

129 

tt        de  almidón 

• 

129 

r»        de  Noche  buena    . 

190 

tr        de  molde. 

130 

Otros  de  molde 

130 

Buñuelos  caseros 

130 

tt        con  frutas 

131 

rr        de  monja. 

131 

tr        de  papas . 

131 

Bisoocbos  de  queso. 

'• 

*                       é 

132 

ir        de  anís    . 

132 

tt        de  huevo. 

y 

132 

tt        de  Santa  Iné*  . 

.      13* 

rr        de  mantequilla 

134 

ti        de  chocolate    . 

134 

,n-    -  ¿a  naranja       f  .  . 

»                   ,   4 

\     ■     .           « 

r     - 

134 

811 

.• * 

píos. 

Otros  de  naranja                                               .  134 

Bizcochos  de  harina 135 

Otros  bizcochos  de  harina        .                 .        .  t  135 

Mostachones   .        .                 \                          .        .  135 

t, .135 

Otros  mostachones 136 

Mazapanes .    .        .               "  .        .             •   '.        .  136 

Otro  de  mazapanes 136 

Chongos  experimentados.                 .        ...        .  137 

n        de  mi  compadre. 137 

i'        tapados 138 

Muéganos  de  Santa  Inés 138 

Molletes  reventones                .        .        .        .        .  139 

ti      .  de  frijol  blanco 139 

Bigotes  de  arroz     s„                "   '     .        .        •        •  140 

Otros  bigotes  de  arroz             .        .        ...  140 

Bollos 140 

n     de  flor  de  naranja 140 

Bollitos  de  calabaza 141 

m       de  elote 141 

Croquetas  de  arroz .        .        .        .        .        .  141 

n         de  confituras 141 

Soplillos 141 

Soplillo  de  arroz ".  141 

n       de  papas    .......  142 

n       de  chocolate       .        .        .        .        .        .  142 

Soplillos  de  rosa 143 

Pronto  hecho .        .        ,        ^        «.        .                 .  '143 

.  .  •     ■* 

Suspiros  de  monja  .        .        .  144 

Suspiros         .                        1A 


119 


Picatoste*  de  doraano .144 

Turno  de  mala.                145 

•»     da  bfeooeho 145 

•»     da  arroi  145 

*  §  ♦•     da  garbanzo 145 

»     da  matada  tamal»  oerntdo* ....  140 

Croqueta*  da  malí 147 

»»         da  arroz. 147 

Migaa  da  San  Jerónimo  .  .147 

h      de  Jeau*  María     ......  147 

Bizcocho*  da  Santa  Inés.        .  .        .        .147 

Otroa  bizcochos                                                         #  I47 

BoUoe     , 14g 

Rodeo  fino      *......"„  145 

n     da  aguardiente 145 

Mnégano* I49 

tr        poblano*.                149 

Puchas  de  tierra  adentro.  .     .   .  .160 

BoloTanaa       .  159 

Torrejitas  da  monja.        .....        v  159 

Hojuela*                 151 

Otra»      .  .151 

n     hojuelas* „        „  151 

Gaznate*. 151 

Otroa  gaznate*.                 151 

Otroa      .        , 159 

Receta  para  redafto» 169 

Redafios. 159 

Recata  para  chicharrones 159 

Chicharrones  fingido*              ,       „       „       ,        ,  153 


819 

Otro»  chicharrones  finjidos 163 

Bigotes  de  bien  me  saben 153 

Mamón  de  almendras 154 

REPOSTERÍA. 

Manjar  real 154 

Otro  manjar  real 154 

Crema 155 

Leche  crema 155 

ti     de  chico  zapote '      .  155 

m      de  garbanzo 155 

it      de  mamón     .  • 155 

h      quemada 150 

ti     cuajada. -  256 

«          -w 156 

Otra  leche  cuajada 156 

Leche  imperial        .        ,                .                 .  157 

n     de  huero      . 15c 

ft     de  coco.        .......  156 

»      "      •» '.  158 

Otra  leché  de  coco  •                 .        .       \  i5s 

Leche  de  coco  grande                              ....  158 

11     mulata ,  158 

»         »       .        .        .        .      '.        .                .  159 

Flan  de  leche ,        .169 

"     1»      1»    .        .        .        .        .        .                .  169 

"      11      if 160 

Ponche  de  leche                  ,  .  ;  .  160 

Funche  de  leche  .    .          .    .    .  161 


314 


>  n 


fJLgs. 

Bocadillo  de  loche 161 

Puchero  de  lecha    .  161 

Torre  jas  de  leche    .  .161 

m      de  manjar  blanco 161 

Cremas «  163 

Oreraa  de  chocolate. 163 

.   ti    de  cafe*. 163 

ii    de  te* 163 

h   de  flor  de  naranja  al  linón  ó*  á  la  vainilla  163 

r»    álafrangipan 163 

it   al  caramelo 163 

ii   batida 163 

ii   de  almendral  dulces 164 

ti   de  rosa.        .  164 

ii    sambaglione,  6  espuma  italiana  164 

it    báquica.        •  164 

ti    asada 166 

Cremas  de  fresas  6  grosellas 165 

Crema  de  vino        .......  155 

ti    de  pastelería 165 

ii    medicinal 166 

Fasta  para  antes 186 

Ante       . 1¿6 

ii    de  los  claveles                                 .        .  167 

ii    de  mantequilla 167 

Otro  de  mantequilla •  168 

Ante  de  betabel 167 

it    de  jericalla    .                 168 

ti    de  garbanzo 169 

if    de  nueces iQ) 


315 

fJLqb. 

Ante  de  leche 169 

de  mantequilla 169 

de  pifia .169 

de  huevos  moles 169 

de  almendras 169 

de  jicama 170 

de  coco 170 

de  jitomate    .        .                 .                 .  170 

de  palacio               170 

de  requesón 171 

de  leche. 171 

de  huevos  mejidos  .  .171 

de  mamey 172 

de  pepita       - 172 

do  pasas. 172 

de  naranja 172 

de  coco,  arroz  y  almendra       ....  172 

de  camote  y  pitaya. 172 

de  camote  y  pina 173 

de  avellana  y  pifión 173 

'.  173 

de  pepita 173 

Jerícalla. 174 

Leche  de  pina. 174 

antonina 174 

amarilla 174 

episcopal 175 

crema 175 

de  chabacanos 175 

quemada 175 


'316 

Leche  guinea.                175 

11      monde. 170 

11     ooeede 175 

11    parda 179 

Arroi  en  tope  con  leche 176 

11     en  torrija* 177 

11     con  leche  i  la  española 177 

11      con  leche  de  almendras.        ....  277 

ti     con  leohe       .      » 177 

Postre  de  calabaza  de  Cartilla.        ....  178 

11     de  leche                      17g 

Arequipa 17g 

"  •        •        •        ....        .178 

11        de  pina 179 

"          n      11        . 179 

11        de  mamey 179 

•t        de  almendra              .  179 

Otra  de  limón  real  .......  180 

11    de  cidra IgQ 

11    de  habas Ig0 

Arequipa  de  pifia  7  leche  180 

Otra                180 

Arequipa  chiquita IgQ 

Al  j  incalía Igl 

Huevo»  portuguesa»        ......  181 

11      poblanos     .......  181 

1.      rellenos 182 

11       moles. Ig2 

11      de  sorpresa.                 182 

«1      de  nieve 183 


Huevos  espirituales.        .*  .   '     .  183 

tt       moles.         .        .        .         .        .        .        .  183 

Huevitos  de  faltriquera  .      '  .         .         .         .         .  183 

Manjar  blanco 184. 

ii      Sevillano 184 

Sol  dorado  .  .         .  184 

Carne  de  membrillo        .       ' .  ' .         .         .  184 

DULCERÍA. 

Chico  capote  cubierto 185 

Queso  de  Ñapóles    .....         .  .  185 

Marquesote  de  rosa.  185 

Cafiroleta 186 

Otra  cafiroleta.         .        .        .......         .186 

Piñonate.         .        .......  .186 

Jalea  de  grosellas  .  .        .     ■ 186 

ii      de  te  jocote    .        ....         .         ...  186 

ii      de  membrillo. 187 

vi      de  zarzamora 187 

n      de  camoto 187 

w      de  monacillo .        .        .....        .        .  187 

n      de  jitomate  .......  187 

ii      de  uva  .    *    .        .  f  .  188 

n      de  manzanas .  188 

Mermelada 188 

Otra  mermelada  de  membrillo.  189 

Mermelada  de  Cambray  .  189 

Receta  de  mermelada      ......  189 

Mermelada 189 

JLAOOOU9B1U  POBL4KA. — TOM.  IL — 21. 


SIS 

ríos. 

Mermelada  ¿  eoiiejprva  de  membrillos  190 

n        deeiraelas 190 

n         de  chabacanos. 190 

n        de  espolines 190 

Turrón  de  yemas  191 

ti      deOaxaca 191 

m  191 

rt      de  almendras 191 

n      de  avellanas       .        ,  192 

ti      doro  pare  adornar  platones .  192 

Alegría  de  la  Habana  192 

tt      de  maís 192 

Ooosda-de  pifie  y  leche 193 

Alfa jor  de  oooo 199 

DoJee  de  perón  tepedo 193 

Per»  bergamote  194 

Guayabate  como  el  de  la  Habana    ....  194 

» 195 

n        morehano 195 

Témate  .  196 
»        .        .        .        .        .        .        .        .        .196 

Temas  en  dulce 196 

rr      acaramelada» 195 

Jaletina ,  196 

ti      de  riño   ' 197 

CAJETAS. 

Cajeta  de  alfajor  terreno. 197 

Otea  de  turrón  Oexaqoeno 196 


319 

PÍOS. 

Cajeta  de  camote     .......  199 

ii      de  camote  y  calabacita  de  Castilla                 •  199 

ii      de  camote  y  pifia. 169 

it      de  camote  y  pitaya 199 

ii      de  cidra .  199 

•  n      de  membrillo 200 

ii      de  leche  y  mamey                         .         .  200 

ii      de  Chirimoya       ..'•...  200 

ii      de  calabaza  talamayota  y  leche             *  200 

ii      de  arequipa. '  200 

Otra  de  arequipa 201 

Cajeta  de  leche  y  yemas .        .                          .        .  201 

n      de  natas  de  leche •.  201 

«i      de  melón      .......  201 

ii      de  mamey    .                 202 

ii      de  mermelada 202 

Nota 202 

Otra  de  jalea  de  membrillo 203 

Cajeta  de  huevo 203 

Otra  de  requesón    .  203 

Cajeta  de  pera                                                   .        .  203 

ii   *  de  espejuelos 204 

Otra  de  espejuelos  de  membrillo      ....  204 
Método  para  hacer  el  almíbar  clarificado  y  darle  sus 

*  puntos •  204 

Diferentes  puntos  de  almíbar 205 

Almíbar  de  limón   .                 202 

ii        de  tres  frutas    .......  204 

u        decaía 206 

ñ        de  canela  .                206 


.* 


«0 


Almíbar  de  horchata 
rr        de  malTAviaco 
?t        de  granadas 
Clarificación  del  acucar 
Compota  de  manean* 

de  mañana  á  U  portugu* 

blanca  de  peras 

roja  de  peras 

de  capolines- 

de  fresas  . 

de  chabacanos 

de  durazno 


rr 


rr 


rr 


rr 


tt 


tt 


CONSERVAS 


Conserva  de  fresas  y  capulines 

209 

rr        de  chabacán*» 

209 

.  "        de  limón , 

209 

"             rr        rr       rea?     . 

,        210 

rr             rr        n       rallada 

*        -      2X0 

"        de  limón  cilios . 

.210 

»        de  limas  . 

r                     m                      i 

m        211 

.  rr        de  guinda 

4    .      211 

rr        de  mcl"P« 

.    213 

rr        de  naranjas  dulces 

"  '     .     . 212 

Otra  de  naranjas  agrias   , 

212 

• 

Conserva  de  nuez    , 

.      212 

rr        de  granad  has  . 

•           -     .- 

/     .      215 

rr        de  calabaza  melón 

'  213 

.  ..   n        de  cidra  , 

9                       •                  ■* 

214 

TAÓé. 

209 

206 
207 
307 
207 
207 
207 
206 
206 
203 
206 
209 


321 


Conserva  de  sandia . 

de  coco,  jicama  y  pifia 

de  jicama  y  coco 

de  pina    . 

de  pera    . 

de  pera  parda 

de  biznaga 

de  zanahoria 

de  papaya 

de  xilacayote 

de  toronja 

de  zábilo . 

de  betabel 

de  xoconostle 

de  calabaza 

de  zarzamora 
Uvate  6  uva  pelada. 
Manzanas  mechadas 
Majadero 

Azucarillos  ó*  panales 
Manera  de  cubrir  los  tarros  de  dulce 
Mazapán. 
Mazapanes  de  dulces 

y  almendrados 
de  diferentes  frutas 
de  chocolate  . 
de  fresas 
Merengues 

rellenos  . 

con  bizcochos  .. 


ft 


n 


ff 


ii 


it 


»» 


pXos. 
214 

214 

214 

215 

215 

215 

215 

216 

216 

216 

216 

217 

217 

217 

217 

217 

.218 

218 

218 

218 

219 

219 

220 

220 

220 

220 

220 

221 

221 

221 


322 

píos. 

Dulces  secos 221 

Dulce  de  cabello 221 

de  manzana*. 222 

de  membrillos 222 

de  guindas 222 

de  chabacanos 223 

de  papaya 223 

de  palmito    .  223 

de  Indias     .......  223 

de  peras 224 

Peronate 224 

Perones  rellenos 224 

Jarabe  de  horchata. *  224 

m      de  fresa 225 

tt      de  guindas 225 

tt      de  moras •  225 

ti      de  vinagre 226 

Modo  de  hacer  pastillas 226 

Pastillas  de  rosa  .226 

tt        cordiales 226 

ti        de  canela  •       ' 227 

Nueces  confitadas 227 

Caramelo  de  limón .                                           .       -.  227 

Caramelos  de  café* 227 

tt         de  chocolate  ......  227 

Coco  quemada 228 

Mamey  .                                  228 

Pepitoria  de  guayaba  228 

Pulpa  de  tamarindo 223 

Majarrete  habanero                .  •  228 


323 

PÁG9. 

Panetela 229 

Melcocha .  220 

Mangos  en  almíbar. 226 

Plátanos  en  almíbar        ,...,.  229 

Tamarindos  en  almíbar   ......  229 

Piüa  en  almíbar      .......  229 

Capulines  en  almíbar      ......  230 

Coco  seco  rallado  en  almíbar  ♦        .  230 

Bocadillo  de  mamey  colorado  ¿        .        ♦        .        .  230 

fi        de  zapote.        • 230 

Pasta  de  pepita  de  calabaza 230 

Manzanitas  emperadoras.        .        .        .        .        .  230 

Ladrillos  de  guayaba  y  limón 231 

Panelitas  de  nuez  fresca  .         .      - 231 

Dátiles  flnjidos 231 

Bizcotela         .  .        .  '      .        .        .        .231 

Bocado  de  dama 282 

Capirolonga 232 

Bolitas  de  almendra        ......  232 

Postre    . 232 

it      de  natilla 233 

Queques 233 

Alfajor 234 

Tecollotes  de  maíz 234 

Limonada 234 

ARTE  DE  BOTILLERÍA. 

Cafó  236 

Chocolate 286 


324 

FÍG8. 

W: 237 

HeUdot 237 

Helado  de  guinda 237 

t»      de  vainilla  .  237 

Limonada. 237 

Helado  de  chabacanos  y  duramos  .       ' .  238 

Leche  helada  .  238 

Sorbetes .238 

Sorbete  de  chabacanos    .  338 

•i      de  durazno .                                   ,  239 

ti      de  granada .......  239 

m      de  ñor  de  naranja 239 

n      de  fresa      .......  239 

•i      de  crema 239 

m      de  capulines 240 

Helado  de  licor       ...        .         .        '.         .  240 

Bizcochos  helados  .                          .        .        .  240 

Ponche  . 241 

u      de  leche 241 

ii      de  huevos    •  242 

n      de  te* .242 

COMPOSICIÓN   DE  LICORES. 

Curazao  6  licor  de  cascaras  de  naranja  242 

De  cuatro  flores  243 

Anisete  de  Burdeos.  243 

Koyó 243 

Perfecto  amor 243 

Deápio .        ,  243 


325 

pXos. 

Pectoral 244 

Crema  de  ajenjo 244 

De  laurel. 244 

De  rosas 245 

De  menta 245 

Duraznos  en  aguardiente 245 

Otros  duraznos  en  aguardiente 246 

Guindas  en  aguardiente 246 

Anisete                    .......  247 

Aceite  de  rosa.         .        .                  .         .         .         .  247 

Agua  de  Seliz. 247 

VINOS  DE  FRUTAS. 

Vino  de  chabacana 247 

ti    de  capulines 250 

ii    de  ciruela 250 

ti     de  fresas 250 

ii     de  guindas 250 

ti    de  limón         .         , 250 

ii    de  duraznos 250 

ii     de  membrillos ,  250 

ii    de  moras 251 

«t     de  naranjas  251 


LJL  COCINERA  POBLANA, —TOM.  U. — 21$. 


836 

PJtOR. 

HIGIENE  DOMESTICA. 

ENFERMEDADES  MAS  COMUNES. 

Indigestiones .        .        .  252 

Picadura  6  herida  hecha  con  instrumento  agudo  253 

Cortadura  hecha  con  instrumento  cortante  253 

Picaduras 253 

Grietas  en  las  manos 254 

Berrugas 254 

Sarampión 254 

Orina,  irritaciones  en  la  rejiga  254 

El  agua  de  brea 254 

Veje* .256 

Varices 256 

Vómito  negro  6  fiebre  amarilla        ....  256 

Almorranas 256 

Bilis 257 

Reumatismo    ........  258 

Lombrices 259 

Resfriado 259 

Tos.         ....     • 259 

Contusiones 203 

Escarlatina 200 

Obstrucciones. 260 

Cólicos    . 260 

Diarrea 260 

To  roeduras 26k 


327 

págs. 

Náuseas                    •                 261 

Mal  de  oídos 261 

Dolores  de  muelas 262 

Dolor  de  estómago 262 

Callos 262 

Sabañones 263 

Sarna.       .         • 263 

Orina .        .         .284 

Socorro  que  debe  darse  á  los  asfixiados  por  el  frió   .  264 

Asfixiados  por  el  calor 264 

ii          por  el  carbón 265 

Panadizos 2C5 

Gangrena        ........  265 

Ulceras  en  la  boca 265 

Fetidez  de  aliento 265 

Dislocación 266 

CJacotes 266 

Oftalmía. 266 

Sedales  de  la  muerte                ...        .        .        .  267 

Rabia              268 

Quemaduras 270 

Envenenamiento 270 

Cortaduras  . "    271 

Desollamiento  de  las  piernas 271 

Medios  preservativos  del  colera  morbo    .  272 


328 

paos. 

MEDICAMENTOS 

QUE  PUEDEN  PREPARARSE  EN  LA  CASA. 

Tisanas 375 

Cataplasma*   ........  275 

Sinapismo* 276 

Agua  de  cebada 276 

Horchata  de  almendras  dulces.  277 

Balsamo  anodino    . 277 

Vomitivos 277 

Coliño  de  vitriolo 277 

Baños  aromáticos 278 

Baños  de  pies  calmantes. 278 

Polvos  estomacales 278 

Licor  para  fortificar  la  dentadura    ....  278 

Agua  higiénica  para  la  boca 278 

Polvos  para  limpiar  la  dentadura    ....  279 

Modo  de  aplicar  las  sanguijuelas  279 

Aceite  eficaz  para  heridas 279 

Tafetán  inglés.  280 

Aguardiente  alcanforado 280 

Fomento  emoliente.                 .....                 .  280 

M        calmante .        •        ....        .        .  281 

ti        contra  los  sabañones  no  ulcerados    .        •  281 

Gargarismo  dulcificante. 281 

ti          calmante 281 

ti          anti -escorbútico 281 

Bebida  pectoral  .281 


889 

PAOS. 

Bebida  contra  las  lombrices 282 

Lavativa  de  almidón 282 

ti       laxante  purgante 282 

ti       purgante 282 

Linimento  emoliente 282 

ti         calmante 282 

it         para  las  quemaduras        ....  283 

Pomada  para  las  escoriaciones.        ....  283 

•i      '  anti-herp¿tica 283 

Otra 283 

Pomada  contra  la  tifia 283 

Otra 283 

ii 283 

Polvos  contra  la  coqueluche     .                  ...         .  284 

Otros 284 

Mistura  contra  la  coqueluche .                 .         .  284 

Ungüento  contra  las  almorranas  284 

Linimento  para  calmar  los  dolores  hemorroidales  284 

Bebida  anti-espasmddica 285 

ip      calmante 285 

Remedio  para  curar  las  tnrceduras  de  pié*                .  285 

Remedios  para  los  dolores  de  muelas                        .  285 

Otro        ..........  285 

ii 285 

ii .285 

n 286 


330 


pags. 


MISCELÁNEA. 


Par»  baratear  lot  pitos  de  las  habitaciones  286 

Pintura  para  los  ladrillos. 387 

Modo  de  limpiar  los  guantes  sin  mojarlos  287 

Para  grabar  sobre  el  cristal 287 

Agua  para  limpiar  y  hermosear  el  cutis   .  287 

Baceta  pvra  hacer  nacer  y  crecer  nuevo  el  pelo  f  288 

Pomada  para  hacer  crecer  el  pelo J88 

Para  teñir  de  negro  fino  el  cabello  ....  288 

Para  teñir  el  pelo  de  negro 288 

Agua  de  los  ángeles 288 

Agua  de  Colonia 288 

Agua  de  las  sultanas 288 

Pomada  para  dar  lustre  al  cutis       ....  289 

Otra  290 

Pasta  económica  para  blanquear  las  manos  290 

Aceité  cosmético     .......  290 

Leche  de  rosa 290 

Para  perfumar  la  ropa 290 ' 

Pastillas  aromáticas. 290 

Agua  balsámica  para  quitar  las  arrugas  de  la  cara    .  291 

it    de  olor 292 

ti    de  violeta 292 

ii    de  rosa 292 

Polvos  para  limpiar  las  (..'. :'    ?""**.  292 

Otros 292 

Agua  para  fortificar  las  dentaduras ....  292 


331 


Otra 

Espíritu  de  lavan  da  sin  destilar 

Compostura  de  objetos  de  porcelana . 

Receta  para  limpiar  la  plata    .... 

Otra  receta  para  limpiar  la  vajilla  de  plata 

Receta  importante  para  lavar  los  vestidos  de  seda  de 

todos  colores 

Modo  de  limpiar  los  objetos  de  azabache. 
Compostura  de  objetos  de  cristal    . 


TÁtíH. 

293 
293 
293 
293 
293 


294 
295 
195 


Í1N  DEL  ÍNDICE  DEL   TOMO  SEGUNDO. 


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2000