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Full text of "La libertad de los mares"

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LA LIBERTAD 



DE LOS HABES. 



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Tbis worl^ is aii unerrinc ^uírle to accderate auri rrf.ulate 
themarch ofibe liold,and ludfpeiificut politícia». ItÍ3 thc 
light of ti-nth— tbc evideuce of the c rimes of tbeBritish 
government. 

TheTranslator,wc11 nware of the utilityof tbis work,bas, 
in order to render it of raore valiie to i^very class of s^Kïiety, 
properly accented all tbe Spanisb words, to facilitate the 
•tudy of that heatitiful language. 
















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L1BERTAD DE LOS MARES, 



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EL GOBIERNO IIVGLES 

DESCUBIERTO. 

TRADUCIDA. LIBREMENTE DEL FRANCÉS 

KL CASTEL•LANOy 

POR 

Cíudadano de los stados-Unídos é Interprete del Gobíerno 

de la República de Pennsylyània , 
Autor " del Beneficio de un Filosofo," — «de la Gramitica 

Imperial Inglesa y Espanola," y 
Traductor «del Auti-Anglomano," — « de los Ensayos 4c 
Pope, sobre el Hombre," y otros Libros de Literatura. - 



MADRID 

IMPREVTA DE D. CIPRIANO MAT ARS. 

ANO 1855. 









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LA LIBERTAD 



PE LOS MARES. 



10 
Ese minSstro dispone despóticamente de los 
tcsoros, de las fncrzas, de la poblacion, y del 
gcuio de 8u nacioii , para redneir lia sa estanco 
las colonias de las tres partes del mundo j mono- 
poiizar el comercio de todos los cstados ; poner 
prccio à todas las socíedades liumanas ; devastar 
todos los coiilíiicutes, dominar à todos los go- 
bícrnas Europeos ; destruir todos los principios 
de moral, y todos los senlimientos de glòria, aon 
en su misma naciou ; extiuguir todos los gérme* 
nes de libcHad, y todos los principios de Inde* 

E»enden(f{a en los demas pueblos , apagar todas las 
uces de la filusof^a , y liollar enteramente los de* 
rcciíos del liombre , con el empeiiD de disipar to* 
dos sus vestÍQ'ios sobre la faz del globo. 

Pcro el poder de la imprcnta , y el de la Fran- 
eia se oponcii a tan fcroz empresa: el Gobierno 
Francés se ha encargado de contener en su curso 
a esc torrente devastador, y baccr caer sobre la 
infamada Albion las calamidades que ella prepara. 

Los males que ha sufrido el pueblo íranccs y 
durante su rcvohtcion y son la obra del gobiei no 
Britanico. 

La coalision de la Europa contra la Franeia , 
fue el resiíltado de sus intrigas. 

La guerra in justa y atroz que no ha cesado de 
haccria , es el fruto de sus ríquezas. 

Las discordias civiles , y la corrupcion de las 
eostumbrcs , son la obra 4e su política artificiosa 
y mercantil. 

' E'l gobierno BritSiíIco es y ha sido el solo a- 
gresor en todas las gücrrais dei antiguo y ducto 



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miinflo ; é\ solo es el envenenador de ïas revolu• 
ciones de los jmeblos jél es cl enemig^o constante 
àt la paz de la Europa, y de la* prosperídad do 
la Franpía : -es el enoint{;o elerno de la indepeii« 
doDcia 9 y de |a líbertad de las naciones. 

Asi eatia golpc c|ue el Gobíeruo Francés des* 
car|^a jBobrecl, rompé, ^espcdaza inillares de es•' 
ki>oiics a la pe9ad9 cadeoa con que cstc g^obierno 
pérfidíi opi'iine, lavyo líeinpo lià^ insolentemente 
al ffi^jicro liuinano. « 

1)10» anos hà , que él atiza el fuegpo de la g^ne- 
ffk y de la dlífcorcUa contra lodos los pueUos del 
«mudo. ^ 

Cien aiios hà ,-que nsurp y subyng^a; atè^oray^ 
y opríine; liacc dcscubriniientos , y cometé ateu* 
tados inauditos j insulta , y corrompé , eng^afia , y 
manda. 

Uc cien anos ha esta parfe, ha causado siete 
Tcces à la Francia todos los males de la g^nerra; 
en I6»9, en i7S&, en Í7>i0, en 1735, en 177S 
en 1793, y en 180S. Ha coroiiado todas eStas 
maldades y horrorcs , obra de sa política turbu* 
lenta y ambiciosa , con la g^ncrra mas impía y 
mas alroz, la de la coalislon de Piinitz. 

Por. estc mcdio , con una verg^onzosa y larg^a 
imputtidad , la tirania Britànica ag^obia por mas 
de un siglo à todos los pucblos de la tierra , y 
aun parece amcnazar a las gencraciones venide- 
ras. Montesquien ha dicli» « que b Francia no 
dcbfa jamas comrerciar con Ingi'la terra , si no à 
« caiionazos: » y yo diffo , que lia llegado la é» 
poca en que todaa liis naciones unidas y debeu çm<- 



12 

prender este comercio terrible con ete gobíemo 
corrompldo r eorroptor.La sombra&tal oialbecho- 
ra del envioiosoy mcIancóKcoChatbam, preside 
todavía al coose jo del gabinetc de San James* Ella 
dice à los minialros Britanicos: «aaiM{ae no bayé co 
y> Ing^Iaterra ai no dos navios, es preciso armar- 
» los contra la Francia : aun qae no baya en el 
» tesoro del Rey de la Gran-Bretaíia mas que 
» dos gnineas , es forzoso cmplearlaa en dividir^ 
» corromper, y destruir à los Franceses • . • • » 
No es Guillermo Pitt , el titgno lieredero de 
los criroenes y korrores polítícos del dccautado 
Ghatham^ el que , en i 795 , tuvo la imprudèn- 
cia de dceir i las naciónes neotrales quebrantan* 
do, con insolència, los derccliosy ks formas de 
au neutralidad : » la Francia dcbe ser separada 
)>.delmundo comercial, y tratada como si no tu- 
D viese mas que una ciudad; mas que un solo 
D pucrto ; y como si cl esluvicse bloqncado y 
. » reducido & la hambrc por ticrra y por mar. »- 
, , ^, Quien es cl que ba querído degradar a la 
Francia» y baccrla desaparecer de en medto de 
las aocicdadcs políticas? 

El Gobietmo Brílànico• 
2 Quien es el que La osado trabajar , por to- 
dos los medios , con el loco intento de separar à 
mi amada pàtria del mando político y comercial^ 
de btoquearla , para reducirla al liambre ; de re* 
ducirla al liambre , para snbyngarla, y de sub* 
yugarla , para dividir «is despojos entre los Be* 
jrca de Europa? 

Et Gobierm Bríèanie•• 



15 

^ Quiea es el que no ha tenido rubor de aso* 
eiar el idioma de la filosofia y del comercio , al 
Toto bàrbaro de una guerra exterminadora eon- 
ira la nacian Francesa ? 

Ml Gobierno BritànicQ• 

^Qnien es. el que se lia cstablecido sobre la 
tierra 9 como el lirano de la espècie humana ^ y cl 
traficante de crimcacs infersiales ? 

El Gobierno Britànica. 

^ Quien cl que se ha ensenoreado insolente- 
meiitc del impcrlo de los mares , y del comercio 
de todos los paisea ? 

. El Gobiei^no Brilànico• 

^ Qaien el que ha incendíado la Enrojia con 
la haclia de g^uerras conliunas ; cubierto à la A- 
mcrica septeulriouàl con sus criraénes , armado \ 

à la meridiooal con sangricntas eonjuraciones j | 
hecho de la Ilesse un mercado de csclavos , y * 
colmado de hauibre y miscría los tallcres de la 
Àsia 9 esclavizando sus manufacturas ? 

El Gobierno Britànicoi 

^ Quien el quclia hecho perccer en Bengala , 
cinco millones dehombrcs, pra sojuzgar los tres 
restantes que han sobrevivido ha este furor Inir- 
roroso de hambre y de rauerte general ? 

El Gobierno Britímico• 

I Que mano ^tvols ha distribuido instrumentos 
de mortandad y asolaeion 9 por todos los angolos 
de la tierra ; hachas a los salvages de la Amer;-* 
ea ; fosiles ií los habitantes del Vendée^ afiladas 
^achillas a los esclavos dé las colonias , érmas do 
fue^o à los habitantes del Àfrica , y punales en» 






14 

veoenaclOÉ à lo8 cmigrado» de la Francia? 

El Gobiemo Briiànicoé 
f^ Qaien C8 el qae ba inmolado é la mnerte la» 
familias de A cabia , qne manifestabaa desco de 
refiígiarse ^ feu pàtria , la Francia ? 

El (iobiemú BriiA%€o. 

^ Qníen cl qne ha consti tn'ido al oro en el A* 
sia, de la misma snerte que cu la Europa, cd* 
mo el director díplomàlíco , cl agente de las con- 
tra-revolncioncs polít'icas ; el premio y pagpa de 
las guerras cíviles ; el subsidi» de todos los cri- 
ménes J y el ministro mas terrible de la niuerte ? 

El Gobiemo BvUóíhcg• 

f Qnien el que ha forzado las naciones a cons- 
truir cse numero espantoso de bnqncs enormes 
que cubrcn el mar para oprimir a la fierra? 

El Gobiemo Britànico. 

^Quien el que ha eonstruido esos infectog pon- 
tones , esos calabozo^ flotantes , que anaden à la 
intempèrie del mar jos íiorrores de la esclavitud ? 

El Gobiernq BrUdnicOf 

^ Quien cl que ha imag^inado cubrir las colo^ 
nias de devastaciones y ruinas ^ para apoderarse 
exclusivamente de los prpductos libera|ca de la 
tierra, y hacer por si solo el comercio colonial? 

El Qobicmo Brílanico. 

^ Quien el que se lia atre?idoa cpucebir y e* 
xecutar el proyecto sangriento • de hacer. regi* 
mientos de mastines ; armarlos con penetrantca 
{inntas ; ostigarlos por medio de la hainbre , y.sol^ 
ti^loa ca las filas.dfe los soldadosfraneesesi sobrs 



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las asoladaa llanuras de Santo Domin go ? 

El GobiéfnoBrilónieo. 

l^ Qaicn clqne ha fijado un cstipendio é la fe- 
rocldad de las liordas sal vagues de la America y 

Era arrojarlas contra los Amcricanos que dcfen* 
jm armados sií. libertad é independència? 

El Gobierno Briíúnico,. 

í Qnien el que ha provisto à estos antropófa- 

503 de aguardieutc ínfiamatorlo 9 y de cscapeloa 
eitructores? 

El Gobienw Brilànico. 

^ Quien el qne ha hecho conducir a sa campo, 
las Cabezas de los infclices Amcricanos ascsina* 
dos ; y pagado con frívola quinqnillería à estàs 
Jbordas bàrbaras j en recompensa de tan horroro- 
sos homicidios? 

El Gobierno Britànico. 

^ Qnien el qne ha hecho de los crueles é in- 
disciplinables salvages del làgo Ontarlo , batido- 
res del Ejército Inglés contra los concindada- 
nos de Francklin? 

El Gobietmo Brüàtiica. 

^ Qnien el qne ha hecho custodiar el campo 

de Burgoyne por los salvages mas feroces y en- 

■ cuirgados de cometer las acciones, mas crncles 

contra los intrépidos Americanos qne peleab(fin 

.por la libertad? 

El Gobierno Briténieo• 

^, Quien ha. hecho llevaren trinnfo en medio 
.del ejército Inglés , cerca de. Mpnt-rcal , la ci^« 
^beza ensangrentada de la inocente y hecinoifi 



18 

èiiio y gnÈ9íj que, inflamandose por la expio- 
ftion', abrasan é los boqnes , y espareen sobre 
el rostro de los combatientes las senales de la 
ioiquidad feroz de siis eDeinig^os ? 

SI Gobierno BriídnicOé 

j Qnien ba envllecido ó la huirianidad con 
la iDvencion de la Maquina Infernal^ pròpia 

Sara incendiar un pnerto, abrasar ciudades y 
otas enteras? 

El Gobierno Britànico» 

I Qnien ba liecbo , en todos tiempos , mayor 
numero de descnbrimientos dirig^dos é la des- 
truccion del genero bamano; y quien se ba 
g^loriado mas de sus efectos horrorosos? 

El Gobierno Britànieo. 

I Qnien es el qne imamnó armar corsarlos^ 
dandoles dobles patentes , Inglesas y Francesas , 
para unir la supercberia a la violència, y la 
pirateria à la perfidia? 

El Gobicimo Britúnico. 

f^ Qaien ha eolmado de aplausos & ese corsa- 
rio inCeinie de Plímouth que , llcTando pabellon 
holandès , hizo senales de apnro a la vista de 
un puerto de Francia, para excitar la humà- 
nidad; pidió socorros para hacer prisioneros a- 
qnellos qne venian à favorecerie j y corrió & mos- 
trar sa preui é un .nacion que no acostumbra 



19 

castigar amieai (aa tUrre» r espantosos atea- 

tados? ♦ 

El Gobierno Bntaniea• 

^Quien ha cometido , en machas cpocas, las 
mas daras piraterías sobre los bacpies mercantea 
de Francia^sln preceder nlng^ana declaracion dé 
guerra , y con violacion de todas las formas es- 
tablccidas entre las nacioncs cmllzadas? 

El Gobiemo Brítdnico. 

^ QuScn ba hollado , sia rubor , el dcrecbo dé 
geutes basta el extremo de apresar , cual abomi- 
nable pirata, 400 bnques "afranceses antes de la 
declaracion de grcrra de 1 7SS , y exerçtdo lo« 
tratarnlentos mas crneles y mas barbkròs sobre 
los desgraciados marineros de nuestro comercio ? 

£/ Gobienio Britdnico• 

^ Quien es el qne concibió y puso en execn* 
cton la Idea cxecrable de desterrar à los Irlan- 
deses y Escoseses a laé miserables arenas de 
Botany-Bay ^ y de hacer asesinar , en Holanda^ 






Un bnqtie que yerdaderamente era Holandès se encon* 
tró, al^unos dias despues^ à la vista del mismo puerto de 
Fraiicia en el mas extremo peligro, é bizo inutilmente le- 
iiales de la situacion en qne se ballada. Creyose qae era nn 
corsario loglcsj y por lo mismo no se le Heyó ningun sodor- 
ro. El biique pereció; y babiendose salvado parte de la 
fripulacion en la lancha, exclamaba, con razon^ sobre nues- 
tra playa: **^ ; ab que inbumanidad! [ que barbaridad! Voso- 
** tres babeis entendido nncstras senales y nos babeis aban* 
*' donado sin dari:os el menor auxilio. ,f Los Franceses respo- 
dieron: ^^ Si no bemos becho lo qne nuestro corazon nos ins-» 
<* piraba, cnlpad à los logleses; JL•iemos temido caer otravei 
'^ en sús pérhdos lazos. La culpa recae teda sobre la mala 
'• fe de im gobicrao que aut3riz.i traíciones tan barbarat^ j 
<< qlje dplaude à una ingratitud tan .cscaBLd^loMUjv 



20 

en lulia 9 en Francia > y en Amèrica é los vír- 
tuosos patriotas aae sosteoian y con cnerg^ía ^ k 
libertad y la glòria de su país ? 

El Gobiemo Bn/anico. 

^ Qaien ba pcrfeccionado la teoria funesta del 
libelo 9 y los vcnenos de la calumnia , para des- 
lionrar y envlleccr à la libertad de la prcnsa , ha? 
ccr perccer & los mejores ciudadanos j y derribar 
el gobierno de 1^ Franciíi 

E/ Gobierno Vritdnicop 

^ Qnien ba beelio rcsonar , por largo tlempo, 
en los papeles públleos^e Londres, un pro- 
yecto * digno de los Nerones y Caligulas , el 
de romper los dlqucs Holandeses; mouumento 
admirable de defensa Ingcniosa , y de la indus* 
triosa paciència de un pncblo libre ? 

lEl Gobierno Krilànico• 

£ QnIen ba becbo sobornar tcstígos,' ep 
Irlanda , para que depusiesen contra los patrlo* 
fas oprlmldos en aqnel pals , y que los eutrcgó 
di^spucs en manos de una apldadesicavii^e^ina^ 

E2 Gobierno IRritànico. 

? QnIen ba inventado el método barbaro de 
medio-aborcar a los criados Irlandeses , para for- 
zarlos ú declarar contra sus amos^ y justificar 

* La pnblicacion de este proyocto horrible é iufame, 
fué segaiíia por uda dcclaracion de guerra injusta y san- 
gríenla contra la Holanda. 

\ O, euan poco cuesta d ese Gobierno execrable, la yidà j 
::iaiigT• dt Joi hombreil 



fil 

•n inlraiDaQo snplicio con depoucionei arranca" 
<3ag por tiolencia ? 

El Gobiemo Brífamco. 

/ Quten ha heclio enarbolar, en 1795 ^ el 
paveüon tricolor à los coi*sarío9 Ingleses pa- 
ra apresar loï» baques de los Estados Untdos ; 
y malqnistaDdouos eon este pueblo, amigo, anti- 
guo de la Francía^ unir una potencia mas i la 
coalísion de Píinítz ? 

Et Gobiemo Uritànico» 

I Quien ha hccho , atgunos meses ha cargar 
de ultrajcs, y encadenar à nna senora francesa, 
qae iba de pasajjera à Ilambnrgo en nn bnque 
neutral , por la sola causa .de que era hermana 
de un rcpreseutante de pueblo francès ? 

E/ Gobiento Vriidnicom 

^ Qmen ha amena^sado las vidas de nnestros 
mas iluslres generales j hecho ascsinar en mc- 
dlo de sus triunfos al pacificador del Pendeef 
y preparado cl homícidío del heroe de Itàlia 
en el seno de la gratitud nacional ? 

E/ Gobierno Britànico. 

^ Quien ha aprobado la carniceria de trescientos 
marinos Franceses , sobre una fragata anclada 
en el pucrto neutral de Gènova ; carniceria co- 
metida por los marinos de nn navio Inglés? 

El Gobiemo Brilànieo. 

^ Quien ha Invcntado cxcesos espantosos de 
barbaridad contra los prisioneros de guem de 
la Francia y de In ^bnericai j gozadose en in 
htrror? 

Ml G0hÍ9rn0 



28 

^ Qníen dió la orden para encerrar cada no* 
«Iie y é bayonetazos , en calabozos iiifectos à uues- 
tros mai*inci\>s y soldados prisíoneros? 

,' El Gobieno IBritdníco. 

^ l^ojea lia hecko arcabucear marineros Fran- 
ceses jpresos j que íntentaban Ubertarse de los 
Inglesés,3us \erdi^os, [)or niedlo deia fuga? 

Et Got)iemo Britànica. 

^ Qulen ba dado la orden para lanzar , sobre 
nuestros rnarmcros Fiígpítlvos^ una multitud de 

Ïerros voraces , enseüados à dcscubrirlos en los 
osques ? 

El Gobienio Britànica. 

^ Quien ha hecho pasar por las arinas prisío- 
neros Franceses y Amerícanos, iiasta ea los sub- 
terraneos mlsmos en donde estaban cucerrados , 
baxo la proteccion sagrada del derccho de gentes? 

El Gobierno Britànica. 

^ Qulen ha hecho naufragar Franceses , en 
1793 y 9'i, solo por que perteuccian à una 
nacion Ubre ? 

E/ Gabiema Britànico• 

^ Qulen ha dexado impune la accion de a- 
quel Capitan de iVavio, que socorriendo a un 
buqae neutral , proximo à perecer , arrojó en 
el mar uno de los naufragos^ solo por que era 
Francés , y fnc tan cruel que le cortó ^ con su 
sable , el bruzo con el cual estc d^sgraciado se 
liabia asido de su inhumano buque? 

. E/ Gobierna Britànica* 

La Naturaleza , indignada de tantos oltrajcs ^ 



23 

detiene m! plfima...*. Però, k^; que la mcdida 
de las maldades auo no esU colmada*.. .. * 

I Pulen , profuadamente atroz, ha auscitado, 
en aquella mismaj època , motines san^jiiiarlos au 
Gènova , en Roma , y en Corcega ? 

E/' Gobieimo ^ritànico• 

? Paien es el tirano y asesino , que necesita de 
Tolver é encender y y comenzar de nnevo la gner- 
ra continental 9 T de causar contlnuauiente snbl^ 
Tacioiies en Itàlia , ó en el Norte de la Europa , 
para !m]^edir el desembarco vengador que se 
pi*epax'a sobre las costas del Oceauo ? 

El Gobienw Brt^dittc•• 

l Quien lia trabajado jamas con tanta ansía ^ 
slrviéadose de los críménes y del oro y rara re- 
tardar, poralgunos diasmas, el justisimo castigo 

* Sesion del Gonaejo de los Qutruentosj del 19Frii]ia• 
rio del ano G. 

Uu pescador francès, Romainville, descubríó el 6 de 
este mc9, dosrie su barca a un Luque Infles desamparado, 
que, abandonado à los yay venes del mar, iba à ser sepitltado 
entre las olas. Sin consultar lo cndcble de sn embarca- 
cion Roraainvillo volo al socorro de estos d(!Sgraciados ; 
les echó un cablej y cousiguiò cl reniolcarlos basta cl 
puerto. 

El ministro de la marina Francesa envio i estos Prí- 
sioneros à Iiiglaterra sin rcscate, enseaando, por est.» con- 
ducta, ni ministerioIncU'S, cuales sou los principios ge- 
nerales que sigue el <'e la fraucia. 

Comparcse esta accioa, cou el proccdin^iento del Capi- 
tan Inglés que asesinó al naufrago Frunccs; j scft'rala 
influencia del atroz ^obicrno de lu^atcrr*. 



24 

y demasiadaméiite tard/o , qat el nniTerso opri- 
loido no cesa de inyocar sobre sa cabeza culpable? 

El Gobtemo Vriíàmco. 

iSe necesita acaso de algpnn rasgo mas para pino 
far tan horrible ciímulo de maldades ? Ayer mis- 
mo, nn soldado Inglés ^r divertirse, apunto 
eon su fnsíl à nn prisioncro , y le mató. En se- 
guida llego un comisario del gobierno, y despues 
de haber reconocido el cadàver, se retiro con 
frialdad, dïcieudo; y,no es nada; es un Fran- 
cés*.. •(( Espantosos crünenes^ cometuhs por 
el Gobiemo Brttanico^ parccen haber esca^ 
podo la atencion del elocuenie Barere , el auloil• 
de la Libertad de los mares : el Traductor de 
esta obra immortal suplirà , en parte esta otni» 
sion , publicando aquellos que por su enoí'midad 
Crée «ei* de mc^or importància* 

Gobiemo Britanico ; gobierno borroroso, 
fundado sobre las osamentas de mil pueblos sa- 
crificados à tu furiosa ambicion I 

iTúy el nsurpador de Bengala , y el asesino 
del Emperador Tipoo-Sàib y de toda su família! 

2 Tü èl dosorganizàdor de los gubicrnos de la 
índia , el verdugo del Subad Sera-Jael-Dowlai 
y del Subab , aliado de Afeer-Jafier ! 

j Tú, que no quiercs sinó reyes y princi• 
pes yilménte sometidod à tus feroccs capricbos y 
y que baxo la màscara dé la mas atroz perfí- 
dia , te has servido del nombre uel empera* 
dor del Mogol para hacer destronar , eselavi- 
zar, ó àsesinar todòs los Subabs qne no han 
q|iicrido sufrir iué cadenai ! 



28 

j/Td, monstrao infame t que btciste, en 
1792, enycacnar al Emperador Leopold , j 
en 1801 , sofocar al desgraciado monarca de 
Rnsia 9 P ihlo 1 **, por baber hecho la paz coil 
la Repnbllea] Francesa I 

2 Tü ; ^ité , cinco veces ^ bàà coÜYÒI&ado |los 
bandidos , los asesínos , los emponzonado- 
res p^ra destruir el g^ande hombre de to- 
dos los siglos, cse Napoleon^ ese heroe in- 
mortal de los Franceses ! 

{ Tnj que cubres los mares y la tierra , de 
rnlnas, de bomicidios, de luto, de sangre y de 
cadavcres ! 

2 Tu , el organizador de las sediclones , ^è 
los asesinatos y delagnc^rra civil en F rància! 

2 Tii , cl tirano saug^inarlo de la dcsdichada 
Irlanda I 

2 Tii el despojador , en ticTüpO de paz, de 
las escuadras de los Potentad•s ae Enropa : ea 
Tolon ; en Cadiz ; en el Cabo de Buena Es- 
peranza y en Copenagàe.••• però..., aun no 
son estos, todos los aséladofcs torrenles de 
tus delitós.... de tus extorsiones ! 

2 Tu, bacba incendiaria, que bajo el Tano 
y especioso pi^etexto de coloear al usurpador 
Fernando en el trono , has cnbicrto de cada- 
vcres su desgraciada pàtria, y convertido en 
montones de èsconlbros y cenizas, las fertiles 
campinas dé Espana y Portugal 1 

2 Tu , que vendes armas i los Republicà» 
DOft , y dagas y pnnales à los Realiatas de la 
▲mérica del Sur^ para aumergir en la tan- 






te 

çre hamana esta núcTa cana de la liberiad ! , 

j Tii , el líefe del Vandailsmo del slg^io 19 ! 

2 Tií j el iofame violador de los priucípios 
de libertad, de los dercclios y de la inde- 
pendència de los eindadanos de los Eslados-Uni- 
dos^ cuyas navcs consideras, como iiicrcado^ 
flotantes de esclavos para proYcer y tripular tus 
eiicuadras ! 

Td , qae daS & la gaerra contra la Ame- 
rica del Norte^ ese caràcter de ferocidad y 
barbàrie que te guia y te anima j y que has 
ordcnado a tus Almirantes y à tos otros sate» 
Utcs, de den^oUar, saquear, incendiar y de 
liacer una g^uerra de cxterininio ; desde sus mas 
poderosos moradorcs ^ Itasta los que habítan las 
chozas / 

; Tii, cnya eseucla es cl crimen, recreate 
tn ! la tierra esti va cubierta de muertos I tus 
Vandaios acaban de reallzar , en el antigno 
y nucvo ninndo, tns planes sangulnarios y de- 
vastadores ? Las infelices cindades de Hampíany 
de Huvre de Grace , de Luis-Town , de Alc' 
xantlria , de Penobscot , de Cape Cod y de 
Síonivffton en Nortri-Ameríca; de San Scbas- 
tian en Espaïia, y de Copenagitecn Dinamarca, no 
ofreccn luas à la vista liorrorizada que la iao- 
cencia manchada....dcshonrada...•que una es- 
cena espantosa en dcstrozo y mortandad, de 
exterminío , dé ruínas y de asesinatos I 

I Tu y que en Irlanda te bas revolcado en 
la sangTC iic cuatro millones de sus babitan-. 
iesy y qne tacnes cncorvados con el peso de 



p • 



27 

ta yngo infernal, los tres mlllones qac baii 
escapado à tus complotes de aseslnatos! 

; Tii y que Las empapado las pla]jfas de Qui' 
heròn eon la sangrc de catorce mil marinos emi- 
g'rados Franceses , a quienes tu política , pro- 
funda mente pèrfida y atroz^ habla dado IiospitA- 
lidad! 

, jTu, monstruo horrible! dí; £qae derecW 
tçnlas tti de cog^cr en pirateria, en 1806 , dos 
mil buqiies Dinaniarqaescs : de Violar, en 1807 
y en tíeinpo de paz , el puerto de Copenég ne y 
robar la flota del Rey de Dinamarca , incendiar 
6Ú capital y deg^ollar veinley ciiatro mil de sus 
TosaUos ! 

\ Tn , el crnel inventor del pan compuesto de 
hariiia y cal^ con que has envenenado, despues 
de 20 anos en tus çalabozos flotantes , mas de 
cuarentay cinco mil marineros Franceses! jCo- 
barde! esas son tus prüczas..,. td los has de- 
g^ollado por no combatirlos en sn elemento! 

1 Tií el org^anizador del sistema de piraterías, 
de espoliacioncs , de robos, de ruinas, de bo- 
rni cidios y de sangre contra el comercio y los 
habilantes de la America del Sur , de Cadiz y 
de la llabana , de San Juan de Puerto-Rico y 
de las tslas Filipinas! 

; Tú el infame usurpador de los derechos de 
los Franceses , y el pcrGdo y bàrbaro carcelerÀ 
de su inmortal Emperador ! 

2 Tú , que adornas tus cortès de justícia de 
pericraneos de prisioueros Americànòs que' tu 
kaces despedazar por tus soldados disfrazad#0 



28 

de Indios ! Tos templos , puede fler ^ se re* 
Hn pronto profauados con Tictimas huma- 
inas! O horror! 

I Tú , qne has hecho conducir , èii tnaofo^ 
ep medio del exercito Inglés, cerca del rio 
Mohawky el pericraneo ensaiigrentadi de la 
bella c inocente Miss Rea! 

I Td que has establecido , con ta oro corrup- 
tor, en las princípales ciudades de la Rcpiibllcà 
del IVórtc- Amèrica, talleres de crímenes y 
cohcilikoulos lij çcpías y de picaros, para divi- 
dir^ sus Estados y organizar la rebclioa y los a- 
sesliiaios ! 

j Tú , que oausas los gemidos de la hnmani- 
dad , y que manclias la ticrra y deshonras el O- 
ceano / 

1 Tú , cnyo transito se conoce por los largo» 
rèsttgí•s desangre, y de cadaveres apiííados 
que desM en ambos I^emlsferios , y eu todos lo» 
mares t 

/ Té ^ Gobiertio furibundo y bérbaro que 
con la nano destructora del Duque de We- 
Uington y elasesino é Inceudlarlo de tà cíudad de 
S. Sebaslían) ^nEspaüa, falciste en 1810, ar- 
der todas las iabricas que encontró eu su ver- 
gonzosa retirada , dclante del general Francés 
Massena , para Villa Franca de Alrnelda ! 

2 Tii el usurpador de los dercclips de los Por* 
tnguesesy de los Brasllenscs que tlenes encor- 
vados con el pes# le tu yugo sangriento ; di- 
al mundo que íà has por uiedlo de uuos Infames 
«oboraados magistrados, vertldo, d dia i5 d«Oc- 



29 

tabre àe 1817 , en^nn patibulo, la sang^e Te- 
nerada del ilustre general Gomes Freire de An- 
drade , y la de nueve distinçuidos coronelesy 
Ciudadanos , * por ser amanies de sn Pàtria ^ 
enemigoB de tu vil agente, el ensançren^ado ti- 
rano Beresford ! 

]Tü , Pirata y ascsinol tu, i quien Veo todo 
cubierto de crlinenes, y empurpiirado de san- 
gre Castellana! dí: ^ que se han heclio de las 
cua tro fragatas Espanoias que , en 1804 , nave* 
gando en plena paz y baxo la fe de los tratados ^ 
llevaban a £spana los tesoros del nuevo mundof' 
Però; que, monstruo ! tii s•sries, Tacilas, y 
cal]|is ! Ày I los alaridos , los Uantos , y soUo- 
zos de las yiudas y de los bueifanos , que ban 
dexado, trassi, las víctiinasqnc tu has inuioladd 
a la sed del oro y de tu ràbia asesina, no anuncian 
sinó demasiado ^\ mundo, las proezas de tu fria y 
cruel ferocidad . Tus Almirantes ^ 4ignos mini»- 
tros de tus ftirores , no surcan los mares si no 
cual verdaderos piratas : ellos buyen de los ba- 
xeles am:gos ó enemín^os, si su numero ó sa 
fuerza les p 'ese^tan pciigros : però ; ellos losata- 
cau j si ehlan eiertos que sus tiros pueden lle- 
var la muerte ^ y asegurar su presa • Fieles ea 
mantener hs derechos^ que tu llamas tus de• 
rechos martlimos; el nníverso va é ser testigo 

tor la cenlesima vez^ de tus insultos, de ta 
arbarie ^ y de tus atentados contra el derecbo 

* I pel infame GobíerDO Britinieo ,|celebre8 Sríctímafl; 
paiM. jícnpre yuesirof nombres yivirin en la memòria. En 
A ctd«l«oqui«a muer^por^U liUitad, nucx•con flocU! 



80 

de las gented . Tos pillaj^es no conocen limites. 
Tü necesitas cadavcrcs^ tu nccesítas riquezcis^ 
y, tn atacas cuatro fragatas perteoeclentcs a 
una potencia neutra ; por que llevan a su bordo 
los objctos de tus horribles dcseos: oro, para 
saciar tu bàxa y cruel avarícia ; y hombrcs , ó 
barbaro ! para apagar tu sed, para ^orbcr sus 

almas con su sangTC j llu momcnto màs; y 

tus feroccs Satclites van à cubrir los mares de 
moribundos , y la Naturaleza de un nuevo man- 
tó fúnebre! Ya se dexan oir los gritos: los 
truenos se cbocan y rcsuenan : el combaté se 
em pena por todas partes , y sobre un vas to tre- 
cbo de mar reyna la carniceria. Tres de las 
fragatas donde no se oyen si no gemidos y don- 
de todo es consternacion , son tu presa ensan* 
grcntada : la otra , que pelca con un corage y 
Yalor dignos de mejor suerte, vucla, cae, se 
liunde, el abismo se encicrra, y todo desaparece! 
; Gobienio Britanico ! j Gobierno feroz ! j Pue- 
da el genio de la humanidad poner este 
cuadro ensangrentado delante de los ojos de to- 
dos los pueblos , é inspiraries contra tí , el abor- 
^ rccimiento eterno que yo te juro ! Desde enton- 
ces, unirse y exterminartc , no seré para ellos^ 
que un solo y mismo objcto ; tii , tigre ! que aso- 
las , arruinas , ensangrieutas , devoras la espècie 
bumana , ó la cargas de bierros ! 

Y , tú , { nncYO ungido George IV ! ; que tle- 
ncs que presentar al mundo, sinó es una vida pa- 
gada en el libertinage y la disolucion ; una vida 
^nyo fiel companero^ es el crimen ; y que j poco 



hsLj iú lias eoronado afilando en silencio, el punal 
que tú destinabas para despedazar el seno de ta 
aag^iista esposa, elseno de la iaocente y virtuosa 
Carolina I *jGran II i os! jQue Priucipe y que 
Gobierno ! { Que Gobicrno y que Príncipe ! 
i Execrable palacio de San James , cueva hor- 
rorosa de malhechores y ascsinos ! j Que el rayo 
no me sea un iustante conílado ! Yo le arrojaría 
8Í! yole lanzaría sobre tí; y yo querría, aun y 
qne sus chispas mcendiarias pudiesen, del mismo 
golpe , aniquilar sobre toda la haz de la tierra ^ 
todos aquellos que tan descaradaincnte malvados, 
son ó tus viles partidaríos óÜis agentes de tus 
crim enes ! 

Oid los hondos g^emidos de la |iumanidad • 

Un clamor unànime se levanta de todas laa 

Íiartcs dci gflobo ; y la indignacion general repite 
esde el uuo al otro polo : [ Perezca el Gobierno 
Britànico/... 

/ Venganza / /Venganza contra este feroz y 
ececrable tirano/... 

Sí ; à tí es , Gobierno Britànico, à quien la 
Francia debe la combinaeion y la creacion venal 
de esas Hgas atroces contra su independència y 
derechos. , 

A tí solo , debe el tratado leoníno de Paduaj 
ItC coalision impía de Pilnitz: la guerra civil de 
la Vendée^ la organizacion de la Cliouaneria y 
las agltacioncs de ciertps depai'tamentosj y la re^ 
bdion de otros* 

*Se Nfiere el Lectcf «1 llbro inglea titulado, 77ie Med-^Be^ 



52 

A ta genio maqníaTelico y cormptor debe la 
Francía el deguello y carniceria espantosa de sus 
deparlamentos del Sur^ el asesioato de los patrior 
tas Franceses; los homícídios executaHos por los 
genizaros de Roma; el desembarco de los enu« 
grados ea \luiberoii; la orgaiuzaciou política y 
militar de las liordas facinerosas de Jesús y del 
&}l "^ ; la de los Queinadores desiiataralizados en 
los Campos, y la de los Salleadores inexorables en 
los caminos* A tu genio niafjiiiaberico y atroz 
dcbe la Francia ^ las desgracias y la devastacion 
de uuestras colonias ; la descrcíoo protegida ; 1a 
eorrupcion de los jnrados ; los desordenes de los 
tcatros ; la calumnia de los diarios^ el veneno 
derramado en todas las fnentes de la prosperidad 
publica ; la extincion del espiritn publico \ la 
ikïgradaeton de las costambre«$ por un luxo ex» 
tremado; la caida del patriotismo , dlsipado en ' 
el c)ioi|ue de las divisione^^ y en fiu , todos los 
males , todos los excesos,* que la mas libre y 
hermosa revolncion se vió obligada , por tus 
intrigas horrorosas é infames, é arrastrar en 
su terrible curso, Llego ei momento en que 
seran explados tantos crimenes: los mares seran 
libre^; \ el poder maritimo, establecido por 
Ja natuialeza, sancionado por el dereebo de las 
aciones , serà distribnido à cada una de er 

'*■ Nadie se ha olridado aun de estàs reuniones escapda- 
lúsas de bombres bandidos, faDàticos, y atroces que « baja 
los nombres de Jesús y del Soly le habian org^anizaao por 
direccion del gobierno Britànico, para ^sesinsc 4 ^ patn(H 

IM benenerüos, y destruir a la f raAtiai 



55 

IJasf... ; Pcrezca, pues, el ^obicrno Britanico! 
No babla hasta este ultimo periodo mas que u- 
Ba sola esperaiiza para los aimgos de la pàtria ^ y 
p^ra los pollticos sensatos de la Europa , y los 
vcrdaderòs filantrópos de la tierra : toda ella repo- 
saba sobre las ylctorias conseg^qidas por el ejércir 
to inmortal de Itàlia; però, actualmente 09 

Joeda mas que un solo medio de salvacion à los 
erechos maritímos de todos los pueblos , y a la 
llbertad de la Europa ; y este es la emancipaçiou 
de los mares por el brazo y el genio poderoso de 
laFrancia. / Perezca, pues, çl g^obieroQ Brità* 
nico/ 

Desde Yeinte siglos à esta parte , labiaip perdi 
do las naciones su soberania ; el comercio gene- 
iral, su independència j los mares, su llbertad; el 
ciudadano, sus derechos; y el hombre, sus litiiloa 
mas preciosos. Los soldados Franceses los ban 
recobrado con las puntas de sjfa bayonetas , y los 
ban restituido é la «specie humana : la imprenta 
los ha inmortalizado : ellos no pereçeràn. 
Despnes de haberlos defeniíido por la victorià sobí^ 
el coatinente,y restableçido por un pacto social en 
Francia , en Holanda , y en Itàlia ; no se necesi- 
ta en adelante si no de co|onizarlo9 en Londres por 
medio de la paz general : ella se alcanzarà C09 
la pronta destruccion del gohierno Vritinieo. Es-« 
fe enemigo linico de tantps .^erechos , y de tanta 
feUcldad , es el que existe impune todavía sobre 
las olés del Oceauo : mostriroslo , es haberlo yen- 

cido / Perezca, pues, elgobienio Dritanico/ 

Por éh fué turbàda é ínyadida la Earopa; k^^ 



54 

meiiazada su libertad , y degollados sos habitan* 
les. Por él, se vé aníqullado cl comercio; y es- 
clavizados los marcs. Ei se balla solo y abandó- 
nadó, por que es oprcsor y criminal* 

Con un csfucrzo mas , todo esta vencído ; y esc 
(j^oblcrno monstruoso no volvcrà jamhs & mancilkr 
la llcrra , ni é deshonrar al Oceano. 

La paz rcinara en todo si nnlverso desde cl mo- 
mento cu que el gobierno Francés derribe el or- 
gullo Vrltàníco , y encicrrc à esa horda destruc- 
los'a de ministros sanguinari os y sns agenfrs 
corrompidos en su obscura xsla. La Europa en- 
tera , obligada à reeonocer su felicidad y y 
los medios verdaderos de conscgnirla , con* 
cnrrirà con la Francia à derrocar à cse co- 
di)so altivo de opresion y oprobiojy à restlta* 
ír la iibcrtad de los marcs à todos los pucblos 
à qoiencs la ha cDncedido la naturaleza. £1 des^ 
tino presente de esta Potencia poderosa, es 
semejante al de los dioses : se ha encargado de 
la felicidad del mundo. ^ 
' Su valor ha dado la paz a la Europa; y sa 
constància debe daria ígualmcnte à las cnatro 
partes de la tierra. 

Los exercitos Franceses han pnesto a la Fran- 
cia, por sns innumerables yictorias, al abri- 
go de todo ataque; no falta mas que un trinnfo , 
para libertar à todos los pueblos de toda usur* 
pacion. 

La libertad de los mares ha renido i ser 
nccesaria à la prosperidad de las naciones y y 
a la {;loria particular de la Francia. 

ïrecicntas leguas fteparaban al exercito Fruí* 



3i5 

CCS de Viena y de BcrUn ; y solamente siete 
leguas le soparan de la costa de luglatcrra. 

Las nievçs eternas de los Alpes Lígarlanos 
y Nórlcos han sldo na débll obstdculo à sus e- 
xercltos victorioses^ y las ólas del canal deia 
Mancha ïio podran detener el curso de sus tri« 
unfos. 

Las óndas del Rhm , del Adlge, y del P6, 
no han servido si no de exitar su ardor mili- 
tar , sia embargo de que habia , à la otra par- 
te de estos grandes rios , un numero prodigio- 
80 de tropas las mas aguerridas de la Eurc^- 
pa. ^Y que puedc suceder al otro lado de la 
Mancha , doade no hay si no milicias las mas 
indisciplinadas ? 

Los diques formidables del Batavo , atrin* 
cherado en el seao del mar y de los rios ^ no 
hau estorbado su marclia triuafante : ^ y podran 
contenerla los Britanos , no siendo dueaos de 
los diques naturales del Oceano? 

Los gobernantes Britanicos cuentan, para 
su defeusa , con los . abismos de los mares: 'pe- 
rò ellos se abriran para sepultaries. El exer- 
cito Francés se propone arrojarlos sobre este 
feroz elemento j y precipitar al monstruo san- 
guinario y decrepito del trono de los S- 
tuarts. 

Los mares dicen ellos , nos sirven de mn« 
ralla : ellos nos hacen invencibles. 

Tambien Cartago se consideraba invencible, 

Sor qne tenia entre si y los Romanos al Me- 
lt«rraneo i però en vano se buscarà el lugar 



56 
doode existíó Cdrtago* Tal scrü la siierte de la 
orgullosa Albíon. 

Ig^ualmente se creia eterna la marítima Ve- 
ncci.a 9 por Itabcr resístído à la liga de Cam- 
bray, al curso destructor de los síg^los, y a su 
pròpia tírauia. Però ella fué pèrfida; fuc a- 
troz ; y ya uo ex!^te çn el catalogo de las. po- 
tencias de Eiiropa. 

j Que miserable paradoxa ! ! Los Inglcses 
son invencibles ! ! ! j A que enemíço han re- 
sístído esos Islenos 1 Los Itomanos ^ los Sa- 
xones y los Jiittos, Iqs Daneses 9 los Norm^andos los 
banyencldo y sojuzgadosucesiyaniente; yeuton- 
ces eran guerreros y pobres : aliora se ballan cor- 
rompidos y opulentos. 

I Los Inglfïses son Invencibles M ! y sin em- 
bargo , debiles colonias sin rentas , shi marina, 
sin exercltos, y solaniente inspiradas por el 
genio de la libcrtad , los han vencido y se han 
elevado con noble fiercza al rango de las na? 
clouen Indcpendlentcs. 

, ; Los Ingleses son Invencibles ! | ! i Río ha 
heclio hulr el exercito francès à sus balallo- 
nes en Dunherque ? i No han implorado de ro- 
dlllas eatos orgullosos Britànicos la clemència 
de los Franceses en Hoscootte ? i No han sido 
arrpjados , como un rebaiio de timidas ovejas, 
de toda la Bèlgica y la Holanda ? ^ No ^ han 
sido arrollados y vencidos en Tnriu , en ^ Milan, 
en Roma 9 en iVapoles, en Florència, en 
Corcega, en SIantua, en Viena, enVenecia^ 
sobre las rivcras del Rhin, y en la fraspira 
de los Alj»es. i Qual es, pues, el Jujgfar de h 



^ Z7 

JEaropa qae no estí marcaclo por sud derro« 
^^ 9 y por las Tictorias àeí ag^ulla Francesa? 
El Lieoa de Sàn-Marcos ya no existe : cl A- 

5 ulla de los Ccsares cayó, LomUlada y vencí« 
a: solo queda qac aterrar al insolente Leo- 
pardo Britànico. 

El iVorte y el Medío d!a se han hamilla* 
do ante las le[>;!ones Francesa» : el Occidente 
las llama; y el Heroe Francés quierc ser cl 
tcstlço de su glòria y contribuir & ella : las 
exorta al triunfo ; y libra sobre su incontras- 
table Yalor^ la gprande obra de restituir la li- 
bertad à estos pucblos esclavizados. 

La paz del continc ntè invoca la libcrtad 
dè los mares ; es preciso arrancar de las ma- 
nos del despotlsmo l^ritànico el tridente de 
Neptnno^ y dcspedazarlo para cl bien gene- 
ral de todfls las nacioncs* 

Un llcy de la antiguedad bizò azotàr , en- 
nn aceeso de còlera , al mar indocil à sus pro- 
yectos de usurpacion; y el pucblo Francés 
ucbé , parà cl reposo del mliiido « romper las 
cadenas del Atlantico , infcstado y sujuzgado 
Ipor un gobierno piratesco. 

I Franceses ! llustres liberladores de la En* 
ropa, i sufrircis por mas ticmpo que cl mar], 
comun a todos los pucblos, sca cl doiniuio ex- 
elusivo de los minlstros Brllanicos , ó de j) los 
marineros de un ex-Elector de Itanover ? i Su^ 
frireis, que un gobierno perfido y barjiaro dib 
ponga de todo el comercio del mundo , y rcí 
insolcut^meute sobre todus las nacioncs ? 



rciut 



38 

Tendedla vista sobre la faz del gploboj j 
le vereis cnblerto por todas partes con los cri- 
menes del g^oblerno Britànico. Examlaadle biea? 
no hay una 6ola playa que el no haya sojoz- 
gado li opriniido j ui una latitud, que no baya 
colmado de luto , y de delitós. Seg'uld , sobre 
la lumensa exteusíon del Oceano, los pasos de 
ese g'oblerno ambicioso y feroz; y reconoce- 
reis 6u rnta por las senales tristes y continuas 
de saugrc humana que el ba dexado sobre los 
dos bemísfcrius , y sobre todos los niares. 

El Occano espçra, pues por los libertado- 
res de la Europa, a fin de que despedazen sus 
<*adenas. Sus ondas , encorbandose ufanas baso 
el peso de las naves bíenbcchoras de los bcroes 
franceses , los conduclràu cou dulce ini|)acien- 
cia basta la Infame cuata del tirano de las na- 
dones , para castig^ar tautas maldades , y ven- 
, \G^^ ^ í^ espècie bumana. 

^i , * Oid al genio de la liumàsidad , que batien* 

.^ * do sus alas sobre el campo Francés, clama 

con Tebemencla : ^^pasa cse corto estrecho, la 

' . ^' victorià te precede, y tus^ncmlgos cacrau 
^^ abatidos à tus plantas. Te dlrlge y te acaudilla 
^^ un heroe bijo de la Fortuna , y amante de 
^^ la glòria: derrlba un trono manchado con 
^^ tantas iufamlas, y díslpa un gobleruo que 
^^ es cl opresor y la af renta del mundo. A- 
^' cercate à esos mji^itòs solltarlos; y los dolo* 
*' rosos^ -y ' vehenientes clamores de nuestros 
^^ prisloneros que mucrcn de hambre en me« 
^' di# de una naclou opulenta^ lastünariu tiïs 



39 
^^ oldos. Abre esos calabosos iumundos y mal 
<< sanos; y veraa 4 veinte y dos mil Frauce* 
^^ ses extenuados de misèria, y agoblados ea 
^^ el colmo de las Texaciones , ofrecer à la pa* 
^^ tria sas barbaros tormentos. Apenas la no-* 
^^ tieia de estos preparativos militares penetro 
'^ ea los paYorosos snbterraneos que los encier- 
^^ ran, eilos levantaron liacia el Cielosus de- 
^^ biles manos, carg^adas de liierros. Inyocan 
^^ à los dioses yengadores contra los ministros 
^^ Britànicos, , que , olvidando los dcberes de 
^^ los vencedores , los tratan como verdugos, 
^^ y les rehusan , por una política bàrbara, 
^^ los alimctttos de primera neccsidad que no 
^^ ba rehusado nunca à los desg^raciados , la mas 
^' dura y fcroz avarícia/^ 

I Franceses ? ^ no atravesarcis el mar para 
libertar à vuestros conciudadanos , y à vues- 
tros hcrmanos de tan horrorosa tirania 7 i No son 
,aun mucho mayores los esfucrzos que de vosotros 
reclama el honor de la Francia ? £ No seran aun» 
mayores los trabajos que emprendcreis con gus- 
to por la fclicidad del genero bumano ? 

j iVunca han sido tan favorables las circuns- 
tancias para esta gloriosa empresa , como abo- 
ra. La Francia goza de to^a la energia pa- 
triòtica que le imprimió una rovolucion gran- 
de. A su voz protectora se clevan nucvas Ite- 
pnblicas en los paiscs que vieron nacer i los 
Canpolicanos y Montezumas: estos pueblos 
reeobran su libertad y van é gozar de los de- 
recbos y bicnes sagrados que les liabca conce- 



1 



4Ò 

dido la tuàtaraleza. Londres , U enemiga 
todaa la3 nacionea, eomienza a hnndijree ba::o 
tl peso de sos antígoas y enormes maldades. 
Ciaa potencias del Afediterraneo reclaman 
tambícn sa contíngente èn la libertad de la 
iiarcgacíon y del comercio. Las del Baltxco 
r la America del JVorte , cansadas de uita 
impotente neatralidaa, quieren líbertarse del 
yngo Britànico. La Espaiia^ baso mi gobicr- 
110 constitucional, adquirirà por nna política 
ilustrada, la faerza natural que sn ptosicion 
continental le prescribe; la yictoria arrancarà 
el Portugal de la esclavitud, y de los brazoa 
mortiferòs del ministerio de Londres. La paz 
del continente rçalizAra los proyectos benefi* 
cbs de la Francla; y el gobierno Britanico, 
éargado con el odio y la execracion general 
del Universoj no levantafà mas sn cabéza de 
* entre los yelos de eda Isla perv ersa. 

{ Jamas tuvò la Francia , én una sola epbca, 
tantos caudillos fankosod , tantos oficiales de mé- 
ríto , tantos generales iltistres , y tac tos soldà- 
dos aguerridos , y acostumbrados à la victorisl•. 
' Los hcroes Francescd , cubren las costas del 
Occeano dcsdc los Alpes àl Texelj^desde Osten- 
de , basta las montaiias Cantà bricas $ de las riberas 
del Tajo, basta élmar Adrià tlco, y dcsdc clpuer- 
to de Ancona , basta laà islas Griegas ; y no espc« 
nin mas que nna sctial pam lan^arse sobre cl alta« 
ttero Timcsis , y libertandole de sns tiranos , pro- 
clamar sobre sus niismas ondas la voluntad general 
d• h Enropa^f el tiatadograndiosoda la Francia. 



41 

Véd aqoí los medios |iilíderosod con qae esta na- 
cion grande, se propone rcalizar \ú libcrtad de los 
mares; asegarar la paz del muadç»^ vengar los ma^ 
les que ha causadoel g^obierno fihtanico à la 
pecie humana ; y adquirir un dcrecfao segnro a ki 
uimortalidad. 

LA LIB£RTAD 

DE LOS MARES, 
O EL GOBIERIVO INGLÉS 

DESCUBIERTOi 



LIBRO PRIMERO. 

DEL PODER MARITIMO EX GEXERAÍí^ 



tiyfRODüCCIOJÏ. 

Voy d hablar de la libertad de los niares: tal 
es el objeto de esta obra. 

Deàcubrlr el gobierno mas tiranico que hà 
existido sobre la tierraj mostrar en sa horro* 
rosa desnudez el çoblemo Britinico j et sen»» 



49 

lar h rata por donde se ddbe recobrar , y cala • 
hlecer la Ubertad universal ^ y la del comercio 
y de los mares. 

Comienzo una raateria sobre quebaymncbas 
cosaa que deeir , y muclias relaciones que unir; 
tnas^ no qulero ser dlfuso. El tleinpo urg^er 
es preciso dcmoler al gobierno Inglés , y ' des- 

Sedazar; en sus manos usurpadoras^ d cetro 
el mar. 
Seria una idea digna del principio del siglo 
à9j el reducir la teoria del poder maritlmo, 
y el derecho de gentes , à princlplos senclltos, 
é maxlmas generales ; y formar una dccluraclou 
universal y solemne de los derechos de los puc- 
blos. Solo cl goblerno Fiances puede rcalrzar 
cste Tasto projecto de la filosofia. 

JLo que ba succdulo sobre la ticrra antes de 
nosotros , debe instruiruos , y lo que vcnios lioy 
en Inglatcrra ^ debe aprcsurar nues tros trabajos. 
Crevea rasgos , corlas iduas , bastan para con* 
vèncer à los Franceses , y bacerles coaocer la 
verdad y la razon en toda su fucrza ; à una na- 
cion, ocupada de guerra y de política, de le- 

Ïes y de iibertad, no es preciso ofrcccr si no 
a luz de los prlnclplos, y la de los resulta- 
dos. 

Las graudes epocas du la bistorla nos pre- 
scntan una potencia marítima siemprc opresora, 
y siempre derribada. 

Kn los diversos psriodos de la vidu de lot 
pucblos, SC cncaeal;'aa algunos que ban sur- 
cado el mar, y que lo ban c.iscnorcado con do»- 



45 
potismo, mientras los otros labraban h tiem 
como esclavos. 

Tal es ei efecto del mar; él inspira ona fie- 
reza natural à los bombres que continnamente 
lo atraviesan. Tal es el efecto de la amblcion : 
ella convierte à esta fiereza en despotismo. Y 
tal es el efecto dci poder losulano: élproduce 
la tirania maritima. 

Los Tirios hlcieron por toda la tierra uïi co- 
mercio .floreclcnte. Sin bruxula y sin politica^ 
f ormaron establec'iiiilentos basta sobre las costas 
del Occauo. Debieron en el principio esta ren • 
taja à la superioridad del couocimiento y acti- 
YÍdad en el comercio, que tenian sobre la ig- 
uorancia de los otros pucblos sedentarios y su- 
persticiosos • Se arrojaron^ despues, la sobera-' 
nia del Afediterranco. 

Presentose Alexandro; y desapareció Tiro, 
csa enemiga altanera del comercio de las otras 
uacioncs • Un conquistadi>r de la tierra ocupo , 
entonces , el lugar de un tirano maritimo. 

Atenas , poderosa por sus minas y sus mari- 
nos j por su constilucion libre y y por su supe- 
rioridad sobre la Grècia , quiso obtcner el im'<« 
perio del mar* Ella excito los zclos de laé 
otras ciudades Griegas , sin bacer tolerable 
611 superioridad : adquirió esclavos con suà 
eolonias , pcro sin aumentar su comsrcio ; 
y dcstruyó las fuerzas de los Fenicio»,^-8Ín 
reemplazarlas. Disipose el poder marilimti de 
Atenas. Republicanos celebres fueron cntòhces 
reeiuplaitadotf por un dèspota corruptor. 



\ 



Cartaço forjo ^naevas'cadeiias al MedherraneOy 

Lextendió sus colonias en cl Oceano liasta las is- 
\ Canarias : però ella fué atroz para con los ex* 
trangeros que navegaban sobre los mlsmos mares. 
Tmpaso leyes bai'baras à alganos insulares del 
Bf editcrraneo: ataco à los senores del icando ^ y 
flranizó al comercio de todas las naciones. Esla 
potencia marítima, osó insultar à Roma , y Roma 
Ja sepulto en la nada. £utonces un oprcsor snce- 
dió à <^tro opresor. 

Romà y qué no habia sido si no guerrera j 
qoiso tambien ser potencia marítima ; mas en 
este tiempo , ya no exsistia su libcrtad. Sus na- 
Tes dominadoras eomienzàn én tú misma cpoóa 
que sss empcradores crueles y voluptuoses. 

Fué un tiempo en que estos yencedorcs traspor* 
taron à Roiiia laà riquczas del ^sia , los despojoft 
de las naciones vencidas , y los monumeutos de 
las artes: debió reputarscles mas blen como nave- 

f' ^adores Sibarltas, que como negoclantcs marí- 
imos. 

Roma no tardo en restituir sus riquezrs al uni- 
yerso por medio dellujo ma^^ estraordinarlo que ía 
corrompió, basta que una Inuiidacion de bàrbaros 
bizo desaparecer de la faz del globo à esos Roma- 
nos cnvilecidos ; y aniquilo el comercio por ma- 
chos siglos en £uro[)a. Una nacion destructora 
reemplazó à un pueblo voluptuoso y oprcsor. 

Una nocbe profunda nos oculta des pues los ves^ 
tígios del comercio y de la navcgacion , basta qué 
el fanatismo de las cruzadas se convirtió en indus* 
irla^ y en pasion por el lujo. 



»4 

Vcnccia habia sacado del fondo de sus pantano^ 
«na marina, y ia libertad; manufacturas , y clerto 
genero de política. Pronto víno à ser la reyna or- 
gullosa de los mares. JLa íiga. de Cambrai , qne np 
pudo quitarie s! no alçunas posesíones de la tiern 
firme , se quebrantó ante sus Ia(funa8 en el siglo 
Í6^ y la coallslon de Pilnitz la dcrribó del todo 
en el siglo 18. Las minas de esta feroz y pèrfida 
aristocràcia ban aumentado el Imperio de la 
Francia. 

La bruxnla que abrió el Atlaniíco, y que hizo 
doblar el cabo de Buena-Gsperanza , destrono à 
TcnecSa y deso en problema , cual »erà la pp 
f cncia que en lo Tenidero podré obtener inayor 
fiie za y po4er sobre el mar. 

En cuauto el Occidente franqueaba sns mïoa 
é la Espant , y el Oriente sn comercio à Por- 
tugal, la Holanda £on una laboriosa economia 9è 
aproYecliaba de todos estos tesoros. Por su Talor^ 
liabia conquistado. Ia libertad ^ por sn audàcia, 
adqnirló colonias ; y por so constància y buena fe, 
creo un vasto comercio. Tremolo sobre todos 
los mares el pabellon de los Bétavos y al mismo 
iicmpo qne ellos enarbolaban isobre sus diques y 
f^atanos, los estandartes de k libertad. Masiíi- 
dostriosos que los poseedores de las minas y de 
las^ tierras, <ellos beneficiaron el iinperio del 
mar. Por esta vez , sucedieron el trabajo y la 
fibertad generosa à la holgazanerla opulenta 9 J 
alJorguUo fatao. 

Estos factores de todas las naciones disper» 
faron Ips celoa del comercio ca Inglatem. J^ 



4« 

la vista de los ^randes sucesos y yentajas del 
Bàtayo , se conmoTió el gobierao lògies; j no 
obstante las discordias civiles qae agitabaa sa 
Isk , él asentó en medio del CK:eano la palanca 
de sa desinesnrada ambicíou. 

La Europa presencio entonces an vergonzo- 
so cspectaculo; vió i dos pueblos creadores de 
sa líbertad política y civil , chocarse con furor, 

Idisputarse la tirania maritima y comercial, 
os Ingleses babieran descado aliarse con los 
Batavos para poder opriïnirlos mcjor: pcro los Bé« 
taros qoisieron antes batirse que envilecerse. 
Estàs dos potencias maritimas se debilitaron para 
la felicidaa del mnndo, cuya opresion quedo 
retardada por algun tiempo. 

Un principe mas altancro que poderoso , qni- 
80 entonces poner la mano sobre el Tmperio de 
los marcs. Colbert creaba su marina; Juan Bartli, 
Tonrville y Du-Gay-Trouin mandaban sus escua- 
dras. El combaté de la Hoga decidió de la 
superioridad de los Ingleses, y dió principio à 
su despotismo maritimo. ^ 

Así, no podia la Europa esperar cosa algu« 
na de estàs potencias maritimas, para el biea 
de su libertad, y sus derecbos* del mismo mo* 
do que no habia adquirido el mnndo ninguna 
felicidad ni prosperidad, durante una larga se< 
ir!e de siglos , en la caida de diversas potencias 
que babian sucesivamente osurpado y perdido el 
cetro del mar* 

No se babia becbo mas qae mndar de tiranoi» 

6i hubiera podido existir una potencia marí- 



47 

tima , coya eonslltaclon y lac€8 tuTiescn por fan* 
daménto la libertad j la igfnaldad: cuyaa rela^ 
ciones exteriores se apoyasen en ías basc^ del 
derecho de g^entcs, y en las de una poUtiea 
moral ; qae faubicra emplcado sns fnerzas en de» 
fonder à los Eslados debíles , en sostener i los 
inediocrcs , y en contcncr à los grandcs en siïs 
límíf es : nna potencia marititna que tnvíese . por 
objeto el velar sobre las necesidades de todas 
las nactoncs; llevaries los objetos de eomereío 
de qne careciescn , y extraer el sobrante de sa 
prodncto, y de sn indústria? ella liabiera sido 
ntil & todos los pneblos, y ag^radable a todo» 
los g^obSernos. £1 comercio y la indastria la 
bnbieran clevado altares J y el tiempo hubiera res» 
petado su prospcridad benèfica* 

Alàs si un pucblo marltimo y condenado por 
la nainraleza à la mediocridad , intenta bacerse 
colosal por la fuerza y el poder ; si babiendo 
log^rado ser por medio de la indústria y de la 
maiia , ei factor de todos los otros pueblos y 
qoiere tambien dominarlos por la violència y 
la corrupcion ; si el comercio , este víncnlo 
general de fas naciones y viene k ser en sa» 
nirnos nn instrumento de ambicion y de tifania 
para oprimir à los otros Estados ; si sn ambi« 
cíosa marina quiere mandar la pas ó la guer- 
ra ^ los tratados de alianza , ó las divisiones 
politicas ; aniquilar h la indústria y al comercio 
úe los otros paises en lugar de fomentarlos; 
tnvadir en lugar de proteger ; devastar en lugar 
de defroder : este pueblo es entoncet e) aiote 



48 
mas terrible del genero hamano. Un despotú}* 
mo universal emplea , con ansla imponderable y 
à todos los bra740S del- comercio para oprimir, 
y (i todos los vientos para extender y genera* 
lizar su opreslon, 

Un escritor quç ama i los hombres . no pnede 
nienos de invocar la exccracion g-eueral contra 
este pucblo temible y sumaraentc pcligroso. 

Yo tengo el bonor de habcr atacado en 
Francia , con vi^or constante a la politica y los 
crimeues del goblerno Britanico. 

Soy el prluqiero que lo he denunciado desde 
la tribuna nacional al pucblo Francés, cuya paz 
y seguridad él turbaba por sistema ; y é ía Èu- 
^ >pa j en donde violaha con ímpunidad las leyes 

Íenerales ; d la bumanidad , cuyos derecbos bar* 
aramente atacaba; à los gobiernos, cuya mo- 
ral corrompi» por el soborno y 1» intigra mas 
negra j d todos los pueblos, cuya libertad ci- 
vil y politica destruia por la fuerza y por un 
machiavclismo atroz ; y cuyaruinaaccleraba, usur 
pandoles , con la tirania de los mares , todo el 
pi^çducto posible del comercio y de la indus- 
tria. 

^ Que importa que me bayan asesinado mo^ 
sal y politicamente los escrítores y agentes que 
eiisttin asalariados en medio de nosotros, por 
e3e pérfido y depravados gobierno? EIlos jnç 
dtixaran, sin duda, de continuar sus intrigas^ 
0:is manejos, sa corrupcion , sus calumnias , y dç 
^ kritar contra mi) lu« pasionet miH Yilet del 
m>razon kunumo. 



4d 

Però el amor de la pàtria me hace superior a 
todas las consideraciones y peligros personales* 
Mas bien temeria el perdér una ocasion tan bella 
de defendcr a la Francia ^ desarrollando el horri- 
ble cuadro de crlmenes inaudltos del gobiemo 
BrilàDÍco. Esta sola reflexion me ba hecbo tomar 
otra yez la pluma con qae y en el ano dos , habta 
Losijaejado los prlmeros crimenes cometidosjoor 
este gobierno contra la Franc'ia y la libertad. Qu- 
ando todo se prepara con gloríoso entusiasmo pa- 
ra caer sobre la Inglaterra, y derribar à ese coloso 
manchado con tantos borrores , yo creí que debia 
contribuir con mis eseriios à esta noble emprc« 
sa, j i la de arraygar, de mas en mas en la 
nacion Francesa , la indignacion y el odio con- 
tra un gobierno tan corruptor y perfido. { Pue* 
dan mis debilcs esfnerzos infundir, en nnestroa 
batallones vencedores , la aversion inas implaca- 
ble contra la tirania Inglesa, que irrita à todos 
los animós : y nos abre el camino é la mas jos* 
ta y mas importante de las victorias. 

£1 ptan de esta obra es sencillo: comienaso 
por desenvolver y fixar algunas ideas , sobre el 
poder marltimo en general, afin de demostrar 
despues , con mas fuerza , t|)dos los peligros de 
la potencia maritima insular ? y tal es el objeto 
del libro primero. 

Tambien trato de probar, en el mismo^qae 
el gobierno Inglés, en sus relaciones exteno* 
res , es una potencia contra naturaleza , colosal^ 
fundada sobre odiosos y fragiles cimientos, y 
delesnabU como un elevado montOA d« vrenas^ 

4 



so 

que cl vleoto solo es capaz de abatír y disípar. 
No necesito liablar de los viciós inherentes à 
la constitucion Inlerior del pueblo Ing^les ; la o- 
plníou ilustrada de los hombres llbres de este 
misino puebio la ba Juzgado ; y es preciso res- 
petar sus cenlzas. 

Aanque se bable poco en Europa del dere- 
clio natural , por lo que respecta al estado ac- 
tual de las cosas bumauas, y de los gobiernoít 
politlcos, el gobierno Francés que ha restable- 
cído este derecho , base de su coustitucion , me 
impone la obllgacioii loable de probar, en el 
se{rando libfo^ que el gobierno Inglés, por su 
sistema y es destructivo del derecho natural y 
del de genies. 

El Tercero està destinado ó demostrar, que 
este gfobierno es incompatible con el intercs , 
la seguridad , y la paz de las otras nacioncs ; 
y que no pucde estar de acuerdo con el estado 
de las luces , de la civilizacion , de la filosofia, 
y de la revolucion política que ha experimenta- 
do, la Europa. 

No serà dificil cerciorar , que el gobierno In» 
^les^o pucde coexistir con, tl de la Francia. 
Conduiré, probando la neccsidad absoluta de 
libertad a los mares, y proclamar una decla- 
racion solemne y general del derecho de gen« 
tes , y de los maritimos de todas las nacioncs. 

Los resultados de esta graude Acla de nave* 
gaciou general son faciles de comprchcndcr. Ya 
no haré à mis lectores la injuria de manifcs- 
tarselos. 



SI 
CAI^ITÜLO PRIMERO. 

DEL PODEA HAniTIMO EN GENERAL. 

Se d!ce coinuni^ciite en los gabinctes de Eu- 
ropa? el poder mcrilimo lo exige,..- El poder 

nuivilimo se le opone Ni los luarcs, ni los 

eonlínciitcs dcbca ser el patriïnonio ó la presa 
de uu poder anibictoso y tiranico. Esas pala- 
bras , de un org'atto tan insolente y dcsmedldo, 
no couvíeneu à ning^an pueblo^ que respcta la 
justicia, y las liïyes sagradas de la naturalcza. 

Oid à los politieos: el Imperio del mar dà 
el de la t terra. 

Oi d a los liistoriadores : el soldado^ dlalar* 

Í'/i, ha Iriunfado del marineros la liistoria es 
a escuela de la política. 

Però: ^^que es lo que diee la justícia natural? 
Todos los pueblos tienen igual derecbo al ma**, 
y dcben participar igualmente de las ventajas 
del comercio : iVo dcben sufrir mas limites que 
los de su pròpia situacion , de sn poblacion, l•i- 
ces é indústria J ó los que les ba prcfixudo íjl 
nataralcza. 

No obstante , en cada època de guerra , c/.i 
cada gran tratado de paciíicacion , se oye ha« 
blar, con el tono mas imperioso y firmè, sa- 
bre los intercses dsl poder maritimo. Se habla 
de ellos en los escritos Ingleses 9 y en los con« 
gresos de la Europa; y ellos sonclobjcto de 
que mas se ocupan los que raciocinan sobre cl 



S2 
comercio y la política. El poder marltlmo ha 
Tcnido à ser, pues^ el resorte principal de la 
diplomada Europea ; él es el fantasma aterrador 
de todos los Estados debUes ó aluclnados : rs 
la paslon que desiumbra y domina à todas li^s 
naclones comerciantes ó ricas. 

Conviene definir lo qne se entlende por po- 
der marltlmo en general, para mejor couocer 
lo qne es el poder marltlmo en particular ; y 
para establecer los derechos de fas naclones, 
asl como se registran detenidamente las mon- 
tanas , para descobrir y conocer los manantiales 
de los rios y fnentes que Uevan su tributo al mar. 

Yo dividiré estos dos géncros de poder maríti- 
mo p en comun y exclusívo. 

CAPITULO SEGUNDO. 

DEI< rODER MARITIMO EN GENERAli. 

El poder marltlmo comun es el derecho qne 
tienen todos los pueblos , de navegar j comerciar j 
comunicar ; pescar, aprovecliarse del mar ; encon- 
trar asilo , refugio y eocorro sobre todas las cos- 
tas , en todos los puertos , radas , ó ensenadas. 

És la propledad de todos j es el derecho univer- 
sal* ! Naclones civllizadas , liordas bàrbaras , po- 
blaciones salvages ! vosotras sols todas llamadaa 
à cultivar este domlnlo , siempre indlvlso por la 
naturaleza , frecuentcmente usurpado por la poli* 
tica , y algunas veces tiranizado por la avarícia j 
el orgullo reonidQs. 



S5 

Este poder maritimo se dlvide por pleno dere- 
cho entre todos los paeblos y todas las naciones 
sln ofeoder -la comunidad general de los mares: 

Cada pueblo tiene derecho à defender sos cos- 
tas , SQS puertos, susradas, sus baques ,\^a co- 
mercio y su indústria , con tal que no ofenda à 
la comunidad marítima, à la propiedad indivisa 
de los mares, ó al derecbo de gentes. 

El puede hacer , leyes particiuares para sus 
costal, sus puertos, ysu comercio) però dcbe 
dexar libres todas las rutas, que puede abrir 
y córrer el comercio sobre cl mar. 

Cada pueblo puede organizar , circunscribir , 
y arreglar su indústria particular, y sn comer- 
cio nacional; pcro no puede desorganizar , li- 
mitar , ni arreglar el comercio general , ni cl 
derecho univesal de la navegacion. 

. Tales son los priucipios elementales del po- 
der maritimo comun: no bay otro legitimo y 
justo. Todo lo demas es usurpacion y dcspotismo. 

La historia nos presenta un espectaculo in- 
teresantc, cuando nos hace ver à los pucblos 
mas poderosos destruidos, por la usurpacion 
del poder maritimo comun : cuando nos mani- 
fiesta como los gobiernos, que por sus rlque- 
zas , su grandeza , y sus fuerzas pareeian ser 
eternos , han eucontrado su decadència ó su ru- 
ioa en la Invaslon del poder maritimo de lals 
naciones. 

Las conqüistaii territorlales se mcjoran, y 
líenen ó ser ntilcs : però las marilimas , se con- 
servan rara tcz; sou ^cmprc pcrniciosas. 



S4 

Se ha vlsto nacer, de todas las conquistas 
fle la ticrra, Imperiós diirabSes, y Republi--. 
cas florecíentes : mas no se ha vlstu noiiea sa- 
lir, dfrlas conqiiístas del mar, si no Imperi- 
ós facticios, y despotismo escaiidatoso. 

De iüs piiehios eouí|iiÍ8tadi>res ó gcuerrcros , 
han salido pueblos agricoias, indiiàlriusos é ins- 
triiidos: pcro liordas de piratas y de FlibuS"^ 
ticres Iiau salido sienipre de loi pueblos que 
hau usurpado cl Imperio de los mares. 

La tierra, invadída, presenta al historiador 
y al observador, soberbías eindades, y Cam- 
pos fecundos: y el mar usur])ado , no presen- 
ta si no calamidades y ruínas. 

La vo«E de los Si^^los exhorta à la» naciones 
à que velen sobre cl Imperio del mar, para 
inaulenerlo siempro libre. Este Imperio no fne 
nsurpado jamas, sln causar la agitacion de 
los conti neutes , y sin cubrirlos ue estrag^os 
y de.solacion. 

El Imperio del mar ha producido las gnerras 
del comercio ; estàs han encendido las mas 
vora ces y dcstructoras hog'ueras, sobre los dos 
hcmisferios , y [favorecido el robo y el pillage 
sobre los mares. 

2 Los mares csclavizados ! • • { Los marcs he- 
chos cl domiuio de una sola nacion ! . . { Que 
idea tan contraria a la naturaleza ! • ; Q^^ ^'^1 
cobardia la de las naciones de todo un Conti» 
nente , que miran , como simples espectadoras^ 
las deagraciadas y terribles consecnencias de este 
Imperio usurpado ! • • ; Que horrendo erimeu con- 



ií5 

fra todos Io9 pucblos de la iierra! . . No , los 
mares no puedea ser esclavos: sobre ellos de- 
ben córrer librementc todas las nacíones labo- 
riosas, para llevar, à las dlversas partes del (j^lobo 
lasjdifercntes cosecLas de todos los cliïnas, los frntos 
viviGcantes de la indústria, los placeres de un 
luxo útil, el sobrante de todos los paísesabun* 
dantcs, y las producciones del genío, creado- 
ras de la libertad y de la felicidad social. 

Los buques debcn ser couio puentes de co- 
muuicacion entre los dos continentes , sin que 
ning^una nacion pueda esitablccer en ellos por- 
tazgos, ni dereehos exclusivos por la fuerza, 
ni privileg^ios por la política. 

Solamente los yientos deben ser los tiranos del 
mar, asi como son sus regpuladores beneíicos. Sus 
bienes couipensan sus males ; pcro nada equilibra 
los males que causa la tirania exercida por una 
nacion sobre este elemeuto que ba hecho libre 
la ualuraleza. 

CAPITULO TERCERO. 

ECBOR FUITESTO DE MONTESQUIEU. 

* 

^^Un pueblo pnede ceder à otro el mar , asi 
** como pnede ceder la tierra."* 

Si esta màxima , fijada por un cèlebre pobli» 
cista, fuera cierta, el tratado que termino la 
primera guerra Púnica , no hubicra sido la ver- 

* Espiritu de las leyes 11b. 21. Cap 21» 



Ig^nenza de Romà ; y no se debef la culpar a Car* 
tago*. Estàs dos cindades di?idieron entre sí iel 
Imperio universal, à la TÍsta estnpida del nni- 
verso oprimído: la una retnvo el Imperio del 
mar, y la otra el de la tierra. Este acto de 
violència diplomàtica , hecha à las naciones , ha 
enganado à Montesquieu , cuyo genio se ha de* 
mido mnchas veces aluciuar por los bechos. 

I Oprobrío eterno à semejante política I Oti*as 
son las maximas que conoce y dcbe proclamar 
la Francia. El mar es libre, por el derecbo 
de la naturalesa ; y es comun à todos , por el 
dcrecho de g^entcs; derecho anterior à fos di- 
plomaticos y a la diplomàcia. 

IVo apellidariamos con justícia al g^obierno Bri* 
tanico, el tirano de los marcs, si la Funesta 
màxima de Alontesquicu Fuese cierta , por que si 
un pueblo ha podido ceder cl Imperio del mar, otro 
j)uede conquistarlo. La fucrza del uno seria en- 
tonces tan legfitima como la injustícia del otro. 

jLejos de nosotros tan pelig^rosas maximas! 
Bavemos èstas lineas de scrridumbre v de opre- 
sion que ban cscapado al autor iumortal del 
Esniritu de las leyes. Son las maqcbas del 

CAPITULO CUÀRÍrO. 

» 
DBL PODER MiRITIMO EXCLUSIVO» 

Interceptar a las otras naciones , por la fucrza 
ó por la astúcia, todos los camí nos del comercio y 
de la indústria , subrc c| mar ; apoderarse de lo- 



87 

dos los cabos , todos Íóè estreclios , todos los gol* 
fos , y todas las islas mas bien situadas ó mas fer- 
tiles , trabajar inGesantemente , por arrojar k ona 
nacion del mando comercial , para satisfacer à la 
ambicion ó al antojo; detenersc yreg^lstrar, volun- 
tariamentc^àlos baques de todas las uaclones j m- 
saltar , con ímpunidad , à todos los pabellones ^ o- 
bligarlos à incUnarse servilmente ante un pabe* 
llon nsnrpador : es exercer el poder maritimo ex- 
cIusíto , eúk todos s)nÀ abusos y violenclas. 

Dcsde la caida de Cartago basta la prepoten- 
via moderna de los org^allosos plratas de AJbion , 
no se ba ybto un paeblo ó un g^obíemo que b^ya 
tenido là aadafcia de arrojarse exdusivamente el 
Imperío del mar. 

^ 8e ban TÍsto formar ligpas y confedaraciones , 
para arruïnar k este Jmperio , però nunca para 
establecerlo. Tan cierto es que la violacion paten- 
to del derecho natural, y del de gentes, no ba 
podido ser jamas sinó el crímen de nn gobiemo 
tirànico , é de una nacion ambiciosa* Las nacio- 
nes en cuerpo son como los índividuos en Re- 
pui^lica: ellak no exercen nunca el despotismo , 
aborrecen los derecbos exdusivos; y tarde 6 
temprano derriban k los usorpadores* 

Ei Ipoderj maritimo exdasivo ba marcbado*, 
desde el Àsia h&cia el polo Arctico. El ba domi« 
nado largo tiempo sobre el Mediterraneo s osó 
mvanzar por la ayaricia del comercio bacia las 
costas del Oceano: y ensenorea actnalmente por 
la inTencIon de la brojula k todos los mares* 

El seguiria su marcba , però las del Norte y del 



BÜtico , para descansar en los brazos de la díla» 
iada Hasia, enya ambiclon acaso se propondría 
eíreunvalar un dia i la Europa, por cl Oceano 
Septentrional, por el Ilfar•]\'egro, y apodera rse 
de las uti'as partes del mundo , si no liubiera He- 
£^ado el si|r|o de las luces y de las revoluciones* 

ííi eslablecimlento del Impcrio Francés esta 
Jestihado por su natnraleza para contener à la 
aínbicion del IVorte , y para encadenar la mar* 
clia y la codicia insaciable del poder marítlino 
exclusivo^ por que este es una usnrpacion in- 
tolerable , y una servidnmbre ímpuesta insolent 
temente no solo à la £uropa, si no é todas las 
otras partes del globo. 

La mas ligera reflexion sobre la blstoría debe 
consolar à las naciones opriïnidas por el poder 
luaritímo , y animar à los Franceses en su glo- 
riosa y justa empresa, dirigida a destronarlo, 
Íà resta blecer los derecbos de todos los pue- 
los ; por que este poder , sea que liaya fun- 
dado su base en el comercio ó en la religion , 
en la política ó en las riquezas , en el luxo ó 
CQ la fuerza militar , en el espíritu de conquis- 
ta ó en el estado Insular , ha sido siempre dea- 
truido desde el momento que se ha dado a co- 
nocer como exclosivo, orguUoso, y tíranico. 

CAPITULO QUINTO. 

RBGtA GENERAL* 

El poder maritimo Uega^ pues, siempre à 



ser e\ mas cwnerclante : el poder mas eoiner- 
ciantc SC liace el mas formidable, si ai mismo 
tiempo refina la política; cl mas iDJiisto, sí à 
esta clrcnnstaiicla auadc la de ser (j^ucrrero, 
el mas invasor, si Ic domina la ambieion; el 
mas tlranico, si està situado en una isla , el 
ïiias Intolerable, si se conserva en esta posi- 
cion , cuando no sea mas que por mcdio si-* 
çlo; y el mas atroz, si llcí^a à conoccr que 
los otros pucblos murmuran de sn despotismo* 

Se necesita entonces de un sacudímiento g^e- 
neral, ó de una conmoclon violenta, que pue^ 
da comunicar una nacion g^randc , para resta- 
blecer el derecbo de g^entes; obIig;ar à la po* 
tencia usurpadora h soltar el cetro dominador, 
volviendo à ans jnstos j antigpnos limites^ y 
reintegrar à todas las naciones maritimas en 
sus rcspectívos derecbos. El exceso del mal ar- 
rastra siempre en pos de si el remedio. 

CAPITULO SEXTO. 

RESULTADOS D^I* POnER MARITIMO COBnUf* 

Poco es para el abrlr fuentes comunes de 
riquezas, de indústria, de trabajo, y de fell- 
cidad , donde cada nacion pneda tomar su parte;en- 
riquecer à cada uno, baciendo la prosperidad 
de todos ; adelantar las artes basta una perfecion, 
de que puedan api^ovecbarse todos. los pueblosj aa- 
mentar por todas partes la navegacion útil, la na- 
yagacion mercante , anmentar los productes de 



60 

la pesca, qne son la basc de las ricpiezas y 
de la marina ^ distribuir , con igualdad , las 
dÍTcrsas venta jas del comercio; propag^ar las 
ideas y el conocimlento del artc de Jas manu- 
factoras^ las espeeulaciones de los comerciantes, 
y las comodidades j abundància de que gfoza 
el cultivador en todos los paiscs. El poder ma- 
ritimo comun , que por su naturalezà se opone 
à que ningona de las naciones posea venta jas 
exclusivas sobre el mar, ó tome demasiadas 
fuerzas para perpetuarse en sus injusticias odio- 
sas, presenta consideracioucs y bienes de la 
mas alta importància , caando levanta un ba- 
luarte respctable en defensa de los dcrcchos de 
todos los pueblos , y ofrece un apoyo firme para 
la seguridad y la paz de la Europa: iine con 
el vinculo de las necesidades y recursos feli' 
ces à las naciones mas remotasj y organiza so- 
bre el globo un nuevo genero de poder que 
es enorme sin ambícion , activo sin turbulència, 
ntil sin peligro , defensivo sin usurpacion , uni- 
versal sin tirania , y protector sin orgullo. 

El poder maritiuio comun, vuelvo à decir, 
hace de todo el uniyerso una sola família de 
^eblos Iguales^ mientras (fíie el exèlusiyo^for- 
ja y extiendc, sobre el globo, nna larga cade- 
na en que aparecen esclavos numerosos y seno- 
res avarien tos. 

El primero conduce à todos los pueblos , ann 
los mas remotos , y dirige a todos los gobier- 
nos , cualquiera que sea su forma , bada un gran 
fin poUtico, Iiacia on interès general, que es 



61 

eltrabajo utU, el justo empleo de las prodaiscio- 
nesy de los medios fisicos y morales, y de la iodiis* 
tria de todas las nacionesj mientraa qae else- 
gando impele Tiolen^amente à algiinos gobler- 
nos hacia el despotisme ,* à muchòs pneblos à 
la guerra; al comercio y la agricaltura à la 
serTldambre j y a todos, à sd roina* 

£1 primero hace i todos los climas, à todas 
las zonas, y à la indostria nniversal del mnndo, 
tribatarias de cada pueblo ; mientras que el se- 
cundo haee é todas las naciones tribatarias de 
Ja indústria , del comercio 9 y de los caprichos 
arbitrarios de unPsola pueblo. 

El nuo, atenido à sa objetoy deberes, jper- 
manece intacto, invariable, y sagrado, asi eo 
la paz como en la guerra j y el olro extien* 
de y varia incesantemente sus Umites en la guer- 
ra y en la paz. 

«Aquel, distribuyendo con igualdad la masa 
total del comercio à cada pueblo , en razon de 
sus facultades, forma muchos poderes, cnya 
feliz mediocridad asegnra su duracion; al paso 
que este forma colpsos de oro y de poder , cu- 
ya ambicion]^y despotismo aceleran sa mina. 

Quando cl poder maritimo coq[iun està en 
vigor, las islas no son mas favorecidas que el 
continente^ y cada nacion tiene derechos igua- 
les, aunque sean diferentes sus medios. Però, 
cuando el poder maritimo exdusivo domina, 
él adquiere una grandeza estraordinaria, una y for- 
tuna mmensa por su sitnacion continental^ y sa 
Imperio víene i »er todavia mayor y senab- 



69 

damenie opresor, y tcranico ^ si ocnpa una pnsl- 
cion iusular. 

Una dcs^rracia basta para destruir al |u»dcr 
maritíaio exclu^ívo, si es i^ualmente contínen• 
tai: üe eüic mudo, la perdída de la armada 
inveneibiede Felípe 2.°, dcstrozada por una hor- 
rible tenipestad t4obre la costa de I»» 3 aterra , y 
el tríste resuttado del combaté naval de la líoga^ 
aniquiiaron p<ir ninebo tíempo el poder inai-i- 
tíino de la Èspaua y de la Francia. Se nece- 
síta, caipcro , i\d niucbos golpes para destruir- 
el poder inarilimo eschisivo , si es insnbir : asi 
es mie Venècia , no obstante liaber per Jido , en 
el siglo 16, nua parte de sus posesiones de 
Tíerra-Firine, no dcxó de conservar su poder 
maritímo en nicdío de sus laçunas. 

Los Gobieriíos , que se elevau sobre las bajas 
del comercio marifinio, no pueden conservar- 
se si no por la iafliieiscia del poder marltimo 
comun: este les concede la justa mcdiocridad 
que los eterniza. Si osan eng^randecerse dcma- 
siado , dei»lumbrados por la ambicíon , por la 
política , ó por el or^^uHo ^ alarman a las otras 
naciones con el tcui^M* del poder marltimo ex- 
dusivo; yprovocauel odioy la vengauza g^eueral. 

Su modèstia aparonte engana poralg^un ticm- 
pò à los pucblos , ocultandoles sus miras y su 
ambicion. Ktlos se eievan al principio , y con- 
solídan su p:ider^ sln causar zelos à las otras 
nacloues: però, dandose a conocer lueg^o por 
los actos de injustícia y despotlsmo que prac* 
tiean, son odiados v destí uidos. 



63 

Sa^'clcvacíon faé la obra de la sorpresa ; sa 
caida es el justo castigo de qne se lii«o mcre- 
cedora sa conducta: y el poder maritimo co- 
luuu recobra su Imperio. 

CAPITULO SEPTIMO. 

AESULTADOS GENERALES ORL PODER 
HAR1T1»0 EXCLU81V0« 

Rste poder es mas activo j però turbiiletito; 
mas emprendedor , pcro despoiico; y mas faeil 
de esUbleccr en una Isla , però mucko mas ti- 
ranico í|ucJ sobre el Contíneute. 

£1 necesíta de diseusioucs politicas para con-* 
servarse y eugrandeceree 5 necesíta de aumenlar- 
se, y de inqutelar à las otras naciones, sem- 
brando en medlo de elias el desurden , la se* 
dieion, y la jj^uerra , para lleuar su peculiar 
destino y su anibicion natural. 

£1 iniprime grandes sacudimientos , y labra 
san{*rieutas revoluciones: arrastra sobre los an* 
cbos mares el destino de los pueblos, que de- 
bian existir pacilicos sobre la ticrra; lleva el 
' terror basta ias exlremidades del globo , y dic- 
ta leyes a todos sus vecinos ; baee de las rl- 
quezas del comercio una palanca de poder, y de 
esta palanca política un cetro tormid&ble de tirania: 
obstrnye ó rompé, à su aiitojo, h>s canales deia 
Indústria de las otra« nacioues; paraliza las 
uiauufacluras , y las piiva del sendero geueial 



64 

del comercio j aguL•ia al pneblo con Impacstosç 
lirrniua à la posteridad con emprestitus • em- 
briaga à los g^obicrnOs con la dulce apariencia del 
£oder j y propaga el despotismo por medio de 
LS riquezas : adqaicre multitud de allados en 
razon de sns graiides snb^idios^ goza de una 
conslderacion / extraordinària por 5u» cplonias^ 
y de demasiada influencia por su corrnpcion y 
politica maquiavelica: eng^andeee eccesivaúien» 
te i la nacion maritima que lo posee, sacrifi- 
cando la iranquiüdad y los bienes de las na- 
eiones territoriaies ; engruesa prodiglosamente 
las f iierzas navalcs de una solat nacion : turba 
frecuentemente la paz de las otras j y como es- 
tàs fucrzas extraordinarias picrdeu pronto si^ 
proporcion con las facultades y med!o§ reales 
ue la sostienen^ ellas ocasiouaii la infelicidad 
c muchas ^eneraciones con una bancarrota ge- 
neral y asoladora. 

£1 espiritu de agitacion, de descontento , de 
Tenalidad, y de intriga es iiiberente al poder 
maritimo exclusivo, que no se sostiene si no 
por nicdíos artiíiciales y corruptores. * 

£1 arrastra consigo todos los riesgos de 

• El orguUoso hercdero de la ambicion de Carlos 5." en- 
▼erenò a todos los eabiuetes de la Europa , con este cspiritu 
tarbiileiito y venal. La politica tenebrosa de Felipe 2.» ali- 
mento larço tiempo, cou los tesoros de Mexico, las discor- 
diai civilcs de la Francia. De igual modo se vió , dos siglos 
desi^iiet , al gobierno Britànico producir , con el oro, las 
jDwmas agitacioneí; fomentar las misroas discordias, éon las 
XQisotas Uktrigas j y corrompcr à la Francia, para dividiria^ 



1 



vn eomercio de eontrabando : los tntodos se 
lo limitan } y él lo extiende Yoluntariosainente 
con sa astúcia, y lo dèfieiide despaes con la 
snperloridad de sns fuerzas : forma en segpoida 
destructoras bandas dè foraj^idos t còrsariós «jne 
A la primera senal de guerra; saitean àl conier* 
cio, y asokn las còstaa. De està manera lia 

C>bIado el gobiemo Britinico las enaridas de 
s islas Babamas^ y los escòlloa de las Berw 
tandas, con esos tlborones Britàmcos, qne de* 
yonin el comercio de jpuropa y de America^ 
A la primera senal que les dé. 

Ei se hace vccino de todos los Estades por 
sns flotas y escuadras numerosas, à las que 

EroTcc por sos riquezas nsnrpadas, 7 P^' ^1 
orrjble y violento cng^ncbe de sns marmeros* 
AzcSte de L• tíerra por sns còlonias^ tiràno 
de lois mares por sns bnqués: se bace témer 
Con facilidad, ó devasta y opnme impnnemcn- 
te. Hace nna'^Gg^ura respetaUeCn los neg;ocioa 
del Contineute; y no permite qne otro g^bier* 
no k baga en los del mar. Ubiiga é la úrg^ 
llosa indigència de los Reyes é solicitar sa 
alianza, y dicta la guerra à ]a oiega pobUdon 
de las naciones esclavisadas. Guarda on tono 
decisivo y el mas iúiperioso en la diplomàcia^ 
y las formas burbaras en la navcgacion. 

El poder maritimo exclnsivo eS, finalmiHate, 
tan devorador y tan^inaaciable que nada es ca* 
paz de satiafacerlo. 

Posee el espiritu de invasion^ de comérdo^ 
y doininacion exclusiva* 

5 



ee 

Si kmbiciona algun paÍ9 6 algan prlvilej^to^ 
8U8 tenlativaB renacen é cada momcnto, y en- 
tran siemprc en el calculo de todas sas em- 
presas y uegociaclones. Si liace deacnbrímien• 
tos de íslas ó poblaciones nuevaa 9 solo ae sir- 
-ve de cllas como de mi esealon para una ma- 
yor coorquísta , y para Uavar adelante el Terti- 
go terrible de sa ambicion opresora. Si pisa 
nu territorio extrangero, no tarda en estable* 
cerse en él. Si logra que se le tolere en un 
pa n to 9 se apodera de cieuto por mana ó por 
fucrza. Si acaso se le tolera un abuso ^ no ce- 
^a de aumentavlo de inas y mas basta un né» 
mero espanioso. Si Ucga a conseguir un me- 
dio para liacer el contrabaudo * ^ en las pose- 
siones de otra potencia , se sirve de el para 
justificar un rompimíento ó una guerra con que 
pueda obtener mas amplías y lacrosas concesio• 
nes* Todo lo codicia^ es cxtreuiadamente ava- 
ro j es insaciable} y no descansa ai no en el 
tumnlo • 

* Kl gcbierno Britinico uot presenta multitud de exem* 
plos de cfte sistema devorador y excliisivo. 

1.* £n 170:) , quiso Portugal dcfenderse contra las anti- 
guas pretenciones de Espaàa : el ^obierno firitdnico le 
apodero de ioJo su comercio y de sus minas ; tal es su 
polit icA ; no j^rotege si n3 ílcvorando. 

2.® £1 gobierno i^rilanico hizo en la bahia de Campcche 
establecimienfcos que se le toleraron solamente para que 
pudíese cortar maderas de tintej y baxo cste pretexto, cons- 
truyó alií un dcpó&ito y aimacen , copioso de buqucs y 
mcrcadurias. Hizo contrabaudo i mano armada sobre las 
oosUs del ffÀío Mexicano ; y formó establecimicntos per- 
mancntes, a los cuales no cesóde dar la mayor extension. 



«7 
CAPITULO OGTAVO. 

•■■ 

Diferencia entre el poder marítima jeemmy el 
poder marittmo exelusivo* 

EI mar es el tealro de la demoeracia eomer- 
cial. Cada pncblo tíene igual dereeho é surear» 
le con sos flotas y eacaadras; i condacir por 
en medio de sns ondas, los productos de sa 
«uelo y de au mdustria ; y a corrér , sobre toda 
la extenslou de sos abismos, dcsde el nno al 
otro polo. No hay , con todo , ün bombre seu- 
sato y jnsto qne no conyenga en qne la de* 
mocracla absoluta es el estado natural del po- 
dcr maritimo comun; y en que el poder ma- 
rUimo cxclusivo bacc del mar una monarquia 
absoluta , una tirania sistemàtica , y un dcspo* 
tismo insolente y monstruoso. 

El poder maritimo comun es un estado R& 
publieano : todas las naciones son reputadas eo<* 
mo ciudadanas en él ; gozan igualmente de los 
derechos naturales j politicos, y no conoccn 
baxo este Impcrío justo si no leyes igttales y 
bcneficas. 

El poder maritimo exclusivo es un estado 
despotico. En él , todos los pueblos no son 
nada, uno solo es todo. 

3.* La Espaúa se vió obli|;af1a, en 1763, i conceder niie- 

T09 prÍTÍlcgio8 al gobierno Briténico, en ta baliia de Hon- ^ 

ducas; y él la obligo, en. 1771 , i reconocer taf derechos i 

jobre las islat de l•alklaiid. ! 



5 



68 
El poder maritimo commi no necesita, pan 
conserviírse , si no de la nnion de los púeblos 
y de la. baena fé de los gobiemos. £1 dere- 
eho natural y de gentes j que él observa , es 
cl primcro de todos los tratados : él nos precede, 
él nos sobrevive ; y seria bastante por si solo 
para dirigir à las naciones, si los gobiernos 
fuesen justos. 

El poder maritimo exclusivo es contrario à 
todos los derecbos: él es tan tiranico por su 
naturalesa , que ha necesitado, para sostener- 
se, de una politica siempre bàrbara, y de una 
navegacion sicmpre activa; de tratados atroces 
con el extrangero; y de instituciones tirabicas 
èn sa país ; si es que se puede dar el nom- 
bre de instituciones à las barbaridades horroro** 
sàs del cnganche violento de la marineria, yà 
ese alistamento forzado y a vida con que el Dés- 

Iiota de Albion sacrifica al pucblo qae llama 
ibre. \ 

• Ei^poder maritimo comnn no permitiría nun- 
ca la guerra si no sobre un solo punto; es 
dccir, sobre el de la, agresion, ó sobre el pais del 
agresor» Però cl -poder maritimo exclusivo no ata- 
ca, d no se defiende, sin encender y propagar la 
guerra sobre todas las partes del globo. 

BasA el poder maritimo comun , solo estarian 
armados los dos países que se biciesen la guer- 
ra j ó cuando no, la intervencion del. Congre- 
SüEuropco terminaria sa disputa. 
' Baxo el poder maritimo exclusivo, los dos 
Contin entès estin cobiertos de fuego* Cada ca» 



69 

SonaxOy tirado por un mmo Brilinlco, contra 
una Potencia de la Boropa^ resnena al pnnto 
en Asia^ en Àfrica , y en America. Todo el 
nniTcrso tiene que aufrir un incendio destrnc^ 
tor , por la qucja de algnnos corsarios, ^ por 
algunos fardos de mercaduriasv**- 

A todos los Pueblos intereaa Tcrdaderamen•, 
te el restablecinúento 9 y la conservacion del 

Eider maritimo comun. Solamente el gobierno' 
. ritanico es el que cifra tpdo $u interès y empeno 
en la perpetuacion del poder inaritimo esçíiisi- 

VO. . V ' . • . 

JBaxo el impcrlo de estepoder monstruosoj^ 
se ven, a eadi^ momento, oieTorados los Esta- 
dos debilesj los ignorantes esclavizadòs| Jos 
mediocres 2 « abatidos en la lànguides y la inèr- 
cia y . los poderosos, combatidos por sus intrigas ^ 
aus gverrf^} y.sns fnrpres; y los aliades, re- 
ducidosal triste einpleo de Tasallos, j raçto- 
res s^yos y y 1^ de instrnmentos desgraciades 
4|e 1^ guerra que el emprende ps^ra satisfacer i 
an ?ÓPubicion v a su codicia insaciable» 
.,Ba:(o^las leyes dçl poder maritisao comun^ 
gozan jloa xoas peqnenos Estades de los niis- 
mos dcjrecbos .que tieuen los mayore^ Imperi- 
ós 7 los, goíiiernos. mas debiles reciben la mis- 
ma protecclon maritima^ y obtienen la niisma 
açguridad comercial: los gobiernos mas pode- 
rosos, estan segures de conservar sus riquezas 
s^n snfrir vexstçiones , çn indústria sin .agitacion, 
y au. conslderacíon exterior sin guerra. Baxc^ 
el . poder maritiiào comun^ permanccc tan se- 



70 

gura Gailkri como Carllz; Napoles coino Ams- 
tardain ; Dinamarca eoino Espaiia ; y Succía co- 
mo Francià ; mas, baxo elcxclusivo, Caiiiari 
y Napoles no son scnoras de siis puertos; Aíns- 
tardam, Copenag^ue y Stokolmo liaecn nn cabo* 
tage oiMcaro; y el Texel, el cstreclio de Gibral- 
tar y el canal de la Mancha no gozan de niu* 
guna libertad. 

El poder marlthno cnmnn es el éxerclclo 
permanente y scvero del dcreclio de gcutes; es 
cl estado natnral de los pucbloa^ 

El poder marí timó cxclusivo es la violaeion 
constante y absoluta del dcrccho de gentes; es 
nn estado violento para todos los pneblos ^ }' 
ann para la misma nacioti que lo exerce. 

Entre las manos de los Britauos', no es el 
derecho de gentes el que oprime i los pneblos 
por sn execucion severa : el gobierno de san 
James no lo conoce ) J d menosprecio con- 
tinuo de este pacto y sancion universal de las 
naclones , es el que forma la calamidad y el 
borror del mnndo entero. He aquí los canoncs 
del derecbo de geiïtes que ha adoptado el go- 
bierno Britanico: nia fuerza ^ la {njusiiciay 
la perfídia^ y la eorrupcion:^^ v de algun tiem- 
po k esta parte , Ea Introdacldo tambieO entre 
sns reglas fiívorltas , la del asesinalo. 

£1 poder marltimo comnn es pacifico por 
principio y por necesidad: el e^Kclusivo es guer- 
rero por ambicion y por orgullo. La Europa 
•stuvo tranquila, en cuanto la navégacion fue 
líbrc k todos ; però, se vió agitada y Uena de 



71 

cabnudades, caando Venècia , Garlos tf •*, Liiis 
14 , ó George 3.^ han qnerido arrogane el 
cetro del mar* 

El poder maritimo eomnn emplea las ri^e- 
sas particulares , para aameatar la riquesa pu- 
blica } el exctasiTo se sirve de la ripueza pa« 
bliea , para oprimir y devorar à las particalares. 
Si Londres no existiera , todas las nacioncs 
maritimas tendrian riqnezas piíblicas y parti- 
cnlares. Si Londres no tuviese qne sostenerp 
con el tesoro publico, el peso costoso del poder 
maritimo excfusivo , so gobierno no haria ch«- 
dmplicar las tasas y contribaciones del pueblo 
Briténico, ya demasiadamente onerosas t no %b 
necestCaria , en Europa y de una convulsion 
política^ é de un granue esfnerzo militar, para 
eonfnndir y castigar a algonos ministres tira- 
nos 9 y à . aignnos gobernantes ambiciosos y 
desnaturalizados • 

CAPITULO NONO. 

Diferencia eníre el poder Marilinto de los 
aniiguoSy y el de esie siglo. 

Tiro y Atenas, Cartago, y la misma Venècia 
BO tnvieron mas que la ambicion y las rivalK 
dades del comercio t però Londres posee toda 
bi ambicion, y la sed mas ardiente del poder* 

El poder maritimo de los antigues era todo 
mercantil y colonial ; però el de nucstros dias 
es todo poutíoo y dominador. 



Aüt^pianleiite n6 se àspifai» al Indperio del 
mar ) SI no para comerciar con auperiores vea- 
taja» } però en nuestroa tiempps se le deaea 
para dar Jeyes à toda -la tierra. 

Fomabase anligiiaiiiciite ona marina paraad- 
ooirir las riquezas del comercio ^ però hoy se 
ferma para influir. j mandar en todos los ne* 
çoeios polltlcos del mundo. 

El poder maritimo de los antigaos ^ solo se 
Ocapabi^/en formar factorias de trafico} y el 
taademo, se ocapa tambien con ànsia enapo* 
deraise de todos los gabinetes diplomàtícos. 

Peroy Si lodos. los poderes marilimos moder* 
nas, han qverido formar y poseer alg^onas colo* 
jbías ) cl Britànico no se ha coutenido solo 
dentro de estos limites ; el ha eoncebido el 
proyecto gigantesco y terrible de reducir el 
liniverso enlero i una colònia soya. Tal les la 
tendència y d efecto conseenente del poder 
tearitimo e^dosiTO* 

CAHTCLO iO. 

be Íà$ CoUnwÈS. 

El sistema toloMial de los aotig^noa estàbA 
Sandado sobre d comercio , y de- esle 'sisicinft 
liacian> la Iralernidad, la hospitalidad^ y la pro» 
ieccion comnn* 

El sistema colonial de los modernoa està fon- 
Jbdo sobre la fuerza militar $:y «de ella naces 
la servidnmbre, la avarícia^ y la opresion gieneralà. 



c. 



Los vinculos de las coloniaa con la metro- 
poU j enire los anilguos , era» como los qué 
voen à los padres coa sos Li jos ; iio formaban 
Gotoaccs mas que aoa sola fsonilia• 

Los vtncnios de las colonias con Ja metròpoli, 
entre los. moderaos , son como los que iinení. 
los vencedores cofi los venctdos ; no respira en 
medio de ellos mas que el cspirita de coa« 
quista» 

Entre jos antíg^os , la nacion toda particU 
paba de las venta jas y beneficiós de las colo* 
nias; V entre los . modernos ^ los gobieruos las 
Iiacen beneficiar , por companias de ne{;;ociaa- 
tes , ^ manera de baldios ó ticrras inuiues qfie 
se arriendan al qne mas dà. 

Las cplonias eran , entre los antig^os ^ nm- 
«xteneioa de pòblaclon qne se debia. emplear 
€n el trabajo, y nn mayor número de cindades 
"qne se . debia fundar para el mismo poeblo ; en- 
tre los mpdfirnpy , «on ona Qxtension de co- 
mercio y ambiclon ^ y un mayor nymero 4e 
esekvos y destinados solainenlc; à trabfjaj^ para> 
nua metròpoli eg'oista y viciosa y. altanera. 

Asi pues^ el poder maritímo de los anti{]^os* 
dependia claramente dçl dereiAin corann de las 
naciones ; bien como el de los modernoa tiene 
niía tendència decidida ^ hacia la nsnrpaeion de 
los derecbos de todos los pueblos. 

i Qiiien es . el qne - ba prodoisido esin* dife- 
rencia remarcable ^ . enire el poder mariUm^o de. 
los nptlgnos., y .cl çt<i. los modernoa? Gl sis-, 
tema colonial. . 



74 

EI sistema actaal de las eolonias estil fan- 
dado sobre el privilcgpio excliisivo. Por esta 
causa, el poder maritimo que apoya sus fnerzas 
y^ stt existència sobre las coloDtas , lle|>;a à eri- 
girse prectsamente en privilegio exeliisivo. Este 
caràcter de exclusioa le convierte protito en las 
forias de nna ambicion inqnièta , y en las de 
la tirania nuiversal. 

^ De que modo dexaria de ser tiranico el 
Doder maritimo de los modernf>s? Una' de las 
leyes politicas de la Europa ha proliibido cl 
naTCgar en los mares de esta ó aquella colo- 
BÍa , à menos que se lo permitan tratados par- 
tículares* Por cierto que no hay mncha di- 
ferencia entre navegar en nna latitud , y 
navegar en otra cualqiüera. La tirania de la 
Inglaterra se ha compuesto de la extension 
que ella misina ha dado, por sus bnques de 
guerra y por sn ambieioii mercantil , é la 

Erohibicion de navegar en lodos los mares, 
^e este ecceso , pues , de' prohibidoncs y 
exclnsiones coloniales , debe nacer el remedio 
para loB males del despotismo maritimo. 

CAPITULO H. 

De una reforma neeesaría. 

La Europa gobiema al mundo : ella ha con- 
segnido esta snperioridad por la de sns lucéà. 
El gobiemo Bntànico ha tirauizado à la Euro- 
pa basta ahora : lo ha conseguido por medio de 



•«^■M^^Hil 



7il 

BUS riquezas , qae no ba cesado de extracr clé 
•us colonías. 

Las colÓDias Ic han proporcionado cl poder 
maritiino con ijuc cl , a sn fumo , las ascgura* 

Però , como cste odioso y horrible sii»tetii^ 
eolontal no debc existir , tal como es aclual* 
mente , desde cl inoineiito en que la justicia y 
la filosofia recobren su iinperio sobre la tierra^ 
el poder maritinio esclasivo debc precisauicnte 
sufrir una revolueion , y ver en su extermhiio 
vengados los derechos del genero huuiano. Laa 
colónias no puedeu ser otra cosa que parles 
integrantcs de los Estados Enropeos a que per* 
tenecen ; y por estc medio , la família de ïia 
liemisferio vendrà à ser hcrmama de la del otro; 
A mas bien , no formaran entre aínbas mas que 
una^fiola fomilia. La esclavitud , la degradacion^ 

Íel monopelio dcsapareceran de entre los Lom» 
res. Las leyes coinerciales , los tratados de 
navegacion , las ordenanzas de las aduauas, se* 
ràn mas ignales y jostas , por que serin recí- 
procas entre todas las naciones. Asi pues , la 
policia general , la legislaclon , y las relaciones 
politlcas entre la America y la Europa, debcn 
nccesariamente mejorarse , y adquirir aquel justo 
grado de igualdad y de ventaja recíproca , a 
cuya vista no puede existir el espiritu de do* 
minacion , ni el monstrno horroroso de la tira- 
nia. Consecucnte , seré la destruccion de todo 
poder maritimo exclusivo, por que cl no puede 
sostenerse si no sobre estàs bases criminales que 
debe destruir h reunien de los pueblos^ comtoi ' 



76 

incompatibles' eon %n libettad política jcítí1,.]l. 
con todos lo9 g^cneros de sa prosperidad. Di- 
^oiobIo con gozo é toda la tíerra: <c pasó el 
« tiempo de eaoa colosos de la ambiclori y deL 
« or^Uo hiimano : la Inglaterra vé & caer^ y 
fc las nacioncs aprenderan en • su exterminio fL 
n no abusar de ia fuerza , y à no quebrantary. 
t( por medio de erituenes y maldades espanto-^ 
ii sas , las leyes inviolables de la naturaleza.'* 
En fin , si el gobierno Brkakiico ba empleado 
•as tesoros , sas intrigaa ^ sa diplomàcia , sa 
altanei*a marina 9 sus tr^bajos y sns crimenes; 
y si hipoteca , para decírlò asi , à las mismas 
generacioncs Tenicleras de sn paeblo^ para des- 
truir à la Francia , y oprimir libremente al mun» 
do entero , él toca ya a sii. riiína ^ y e(. r^o 
terrible de la v^nganza brilla sobre $a in&ime. 
cabeza» La paz continental , qu^ se aprosinia^ 
cerrari los puertos de Europa A sa comercio^ 
las manos de la «opalicioa é sus subsidios ^ y. 
abrira su isla a )a. inyasion* La caida íe est» 
g»bierB9 moastruosa ^ incendiaria :, y corrapl^r 
es tan cierta , y mas justa que Ú de Cartago 
y Venècia. 



«•i 
I * 



CAPITULO la. ^ 

Jtíxtateló ie Cartago y íoiütres• 



• "V»' 



^A qpe excesQS no conduí el pojçr .mari-; 
limo exclu^ivp? ., 



77 

Montesqulctt* observa 9 qne Cariago tenia un 
sing^ular derecho degentes? ^'hacia àbogar é todoa 
'^ los extraogeros que traficaban en Serdena^ 
^^ y hacia las colnmnas de Herenles. '- 

Londres oprime à- todas las naciones 
que. navcgan ep el mar de las Indias } 
impone la ley desde Gibraltar à todas las 
^ue intentan comerciar en el Medíterraneo: y 
anuncia , desde lod enriscados castillos de san 
Nicolas, **y en la isla de sauto Domingo, a to-* 
dos los navegantes , qne pronto dominaré ex*» 
èlusivaraente subre el golfo de Meiuco. 

<( £1 dcrecbo politieo de Cartago, anade Mon<« 
(( tesquieu , no era menos extraordinario : ella 
«probibió à los babitantes de la Serdena el 
?( cultivar la tierrà, baxo pena de muerte/^ 

El gbbiemo Britàhico prohíbi6enl793y por 
mcdio de un manifiesto , intimado é todo» los 

Sncblos, què ninguno lievase efeetos y generós 
e subsistència à Fradcia sobre pena de perder 
todos estos efeetos 9 y los buques en que se 

* Kspirltu de las léyeí. Líb. 21 , Chapi 2. 

* * jbl gobierno BriUnico do pofcee ya €ste baluarte, des- 
de doDde anunciaba la esclavitud y la opc^sion & los ricos 

Saises de Montcsuma. Los negros se lo han quitado con maa 
erecho que él lo habia arrancado del podeí* de la Francia 
pero^ la crisis actual de. la Espana^y las rcyoUiciones del 
iiemisfeiio ColumbianOf ofrecen un campo mas ancho & sus 
especulacrones y à su cruel sana, à su ardienteseddesan» 

fre , de domiuacion y de riqaezas. \ Desgraciados los pue- 
los de este nuevo continente, si acaso se dexan seducir 
por los hala^^s y capciosidadcs de los' agentes , y asesinos 
politicos de la pèrfida y tirànica Albion ; sus nos, al mar 
pasmadoy sclamente cadavtres roiírarún i 

El Traductor. 



78 
encontrasen ; y la de qne serian arrojadaa sni 
tripulaciones eu inmundos y horribles calabozos. 
liO verifico asi con el desiçnio de vencerla por 
Iiambre ; y con animo de abattrla del ringo de 
nadif^n independíeute para destrozarla y y repar- 
tiria entre los Reyes aliados. 

Exerció el mismo ' dcrecho ó la roisma infa* 
mia abominable , en Bengala y donde el Lord 
ClLve lilzo perecer de liambre à clnco mlUones 
de bombrcs , con el objeto de sojnzg^ar a los 
tres niülones restantcs «ine sobrevlvieron à la 
pérdida de sus concludadanos, y é la de todot 
sns dcreclios. 

Cl dcreclio político de Iiig^Iaterra con respec- 
to à la^*^ rància y d Bengala , donde reduxo i 
isislcma el azote barbaro de la liambre ^ y re- 
doblo cien veces el peso destructor de las cala- 
midades públícas , es mncho mas atroz qne el 
derecho político de los Cartagineses , con res- 
pecto à los babitantcs de la Serdena^ por que 
eslé los obligaba a ser navegantcs , impídieii- 
doles el que fuesen agricolas ; pcro, el gobier- 
tto Britanico no permitia a los IncUos mas con- 
dicion qne la de ser csclavos snyos ^ y qniere 
prohibir à todos los pueblos la navcgacion. 

Tal fué tambien el dercclio polí li co de Gar- 
tago para con los Corsos. * Con la mira de 
t<N2erlos en mayor snjecion y dependència, ella 
Icé pi'ohibió y so penà de niuerte, el sembrar to- 
da espècie de granos fmmentarios < però les 

* Espiritu de !iis leyc« , Lib.. 21, Cap. 21, 



7» 

enviaba yiTeres desde el Afriea asi eomo à los 
Sardos. 

Por iffaal metodo , el gobiemo Britanieo^ 
eoQ la idea de liaeer à los Portog^eses oias 
esclavos , los ha forzado , por medlo de .one- 
rosos tratados ^ à dexar beneficiar todos sns 
ylííedos por una companta Brítünica 9 y à re- 
cibir de Inglaterra su alimento y sos ropas* 

Los Cartagineses, 8cüoi*es del eoniercio,| del 
óro y de la piata de las nacioncs y quiaierov 
tambien ser duenos del comercio del plomo y 
del estano. Tal es la marcha constante de la 
ambiciou maritíma comercíaL Los Cartagineses 
quisieron recibir estos viles mctales de la prip 
mera mano , para ser sua monopolistas y mer^ 
caderes exclnslvos* Formaron establecímientoa 
para este efecto. 

. En Londres exSste !a misma política, la mis» 
iua ambicion > y cl mismo sistema de monopolto 
y de mercado exclusivo. £1 gobierno Britanieo, 
seiior del Brasil, por la scrvidumbre de Lisboa^ 
usurpador de ülexico y del Pern pop su comer- 
cio ratero, y por su contrabando armado, ha que- 
rido tauibieu ser el nnico dueno del comercio del 
carbon de tierra, preciso à todas las artesy à las 
primeras ncccsidadcss lo ha concentrado sobre el 
Tamesis, almacesiandolo todo en su capitaL Lo 
mismo ha practicado con la pesca, cuyós lu- 
crosos productos ^ usurpados i las demas naeié- 
i|es , ha transport ado exclusivamente a los pner* 
t03 de su isla. 



00 

La marina del gobiemo Britinico aprlsiona^ 
qncma , ó echa à piqüe los buqaes de todas Ia& 
naciones qae encuentra en cíertos mares , a fin 
<de qiie no puedanir, é los mismos patages qae 
ella, pafa bacer descabrimientos , traficar, y 
"traer las prodoccionea extrangerüis. 

Los Gartag^ineses empleaban su poblaeion en 
la marina y çn las eolonïaé: yscrvvinse detro^ 
pas extrang^eras para hacer la gaerra por to^ 
das partes. 

La política orgullosa del gobiemo (tritanico, 
no emplcà sa poblaeion sí uo sobre sus baques 
é en las guarníciones de sus colonias. Se di* 
via , què su destino es cxelosivamente el de jnan* 
dar. Gornpra Hésseses y toma à su sneldo los 
exercitos de los Reyes, para baeér la guerrat 
paga tropas éxtràngeras , para que se batan y 
mneran en defensa de sus riquezas corrupto- 
ras, de su comercio cxclusívo, y de su do** 
minacíou insolente. 

Todo era Tciíal , en Gartago , cnando ella 
eayó de su graüdezQ. Todos los males ó loa 
liienes , las leyes ó la política que el gobier- 
no Brilaníoo puedé -dar ó bacer , se vendcn en 
Londres en k època misma en que el odio de 
la Europa, y las armas victoriosas de la Frau- 
•eia conspiran i derribar tan odiosò gobierno. 

Guando el brazo poderoSo de los Aomanos 

castigo y abatió é Gartago, ella tenia al re- 

•dedor de sí treinta colonias floi^cientcs sobre 

el mismo continente. Guando los Franceses cor- 

ren & castigar y destruir al excecràblc gobierna 



A 



81 

4e I4(md|re9 , él natiepe çn toda la çircnnferencla^ 
de sa iaia sinp fàbrícas arruïnades , un comercio' 

{»araIl7ado , mnUítud de artesanos siq teiier en que 
rabajar, un paeblo consternado y descantento que 
respira el màyor odio contra el gohierno tirano 
que le esclaviza, y le redueea la desolacions \^ 
Escòcia que rccnerda sus derechos , y anhela por 
sn libertad ^ y la Irlanda siemprc oprimida y en- 
sang^rentada por el dcspotísmo altanero y fi^oz del 
gsibinete de san James ; en vano adulada. ultima<* 
^lente con alg'unas çondçscendeucias deslumbrado- 
ras j y resuçlta aicmpre a sacndir el yngo desde e{ 
momento en que le favorezcau las circunstancias^ 
La cousternacion de Cartagò , cuando Scipioi| 
9e presento en Àfrica , mndósc en cobardía : entre 
los Franceses la constcrnacioii solo serviria pari| 
ínQamarlps mas en el dcseo de la venganza , çomo 
sucedió^en 1792, cuando el exercito prnsiano 
osó marchar siobre Paris, ta çonstemaçion dç 
Londres , desde el mon^ento en que lo^ çxércitos 
de Francja lleguen é pisar el territorio Britanico, 
^crà como , la de Cartago : apareçerd entonçcs la 
vil cobardia çn los ricos^ la dçsesperaclon en los 
Hcgociantes; y el terror y I» fuga en los opresores 
que componian a ese gobierno atroz. 

El gobierno Cartagines era tan duro, qne^ 
cuando los Romanos llegaròn a EJspana, esta colò- 
nia les dió gracias por liah^prlos libertado de sa 
Ïugo. EI gobierno Britanico es tan cruel y bar- 
aro contra los Irlandeses, tan opresor en EscO"* 
eia, tan màqqiavelico en Inglaterra, que los f ran* 
peses seran récibidos eo las dos íslas como sus 1^ 

6 



«2 
ber^dorts y liennanps, por todos los ape no cifran 
8U exístçiicia, eii, la de aquel goblemo^ y en la de 
aus ij|oiiíitrup90s abnsos; es deeir^ por toda la 
nacloii Ing^lasa, a <^xçej)cioM de los gubernanfes y 
y de los banqnf^os. y nionopptí^tas^ 

CAPITULO 13, 

Paritlele enire Peneçia y Londres* 

] Veiiecia ya no exisle ! ^ ¥ cual. dcbc ser la 
siierte de l^ondri^s? * 

Venècia , podcrosfi. por sii «comercio en el mundo 
f;ntoncesc.QnQCÍf|p,,y rlça porsu indústria, no ex- 
4;iló. los.zçlos de las potenrías de Ciirupa , si no 
a causa de aus ríqüozas y sus artes. 

Londres enri(]uec!da por su comercio universal^ 
pr I09 dcspojos sa|içrienloti d«* la Europa; y por 
os iespros arrancat dos a (orlos los piieblos, cèle- 
bre por sus inannfactuias por sns artes , por su« 
especulaciones couierciales ; lia vc^uído a ser la o- 
presora de todas las nucionçis ^ por su política ; el 
azute de todas las rc{j[iones, por su marina; y 
el oprobrio de la búinanidad,^por su ij^obierno, 

Uemasiada arrogància en la prosperídad 9 y de 
luasiado orjg;ullo en sus neguciacíoues , bast|iron 
para alarmar à todas las polencias y que se llgaron 
en Cambrai contra Venècia. 

Demasi^da ambicion en el comercio de Lon- 
dres, demàsiada tirania en su navegacion^. y d^- 

* HaMo aquí de Londres , coino residència del go- 
bia-BO la^jles. 



r 



85 

masiada losoliiiicia y a»tacia en sn diplomàcia , 
delien, eon tiias poderosa riizon , alarmar y reunir 
à todos los Estados y todoa los pueblos , contra 
el despoftsmo del (j^obíeí^no Britànico , tan inso* 
portable eomo fitnesto* 

Níng^una potencia estaba descontenta con la 
política de Venècia: todas conspiraron é sn |)ér- 
uida, solo por la vanidad y altaneria que la cau- 
saban sus tesoros, A todas las poteiicias inquieta 
k anibieton Britànica: ella ba, bprimido ya iMirba- 
ramcnte i todas. lía piolitica de èn gabíuete ; las 
li(;iic continaamcíité en zozobnà y én isonvulsion : 
ella inflnye sobre los destines de tódos los pueblos> 
y lo« domina |ior la ftterza , é pòr la eorrnpcion 
tnas afttuta y horrorosa. ^Gomo podré Londres, 
pues, lisonjéarAé dé no haber adquirido el odio 
g'cneral^ , 

Venecià, lèòn^éfèilantè y òi^nHodïií, perdié sa 
cortèideracton , su Crédito y sn poder. Londres , 
tirana y pirata de los mares, saiteadora de los 
trontinentcs y en^j^randecida con tantòs roboi^ y 
dcspojó^ opuientos^ puede acaso conservar sa lus- 
tre, su altiva supremacia, y suto riquezas? 

2 Y que ! Venècia , pèrfida én su neutialidad , 
cruel por aI(]^nos momentos en su veii{]^auza Ciiii** 
ti*a los Franceses, iia dcsaparectdo del nniiHl» p<»- 
littco: ella ya no e\iste si no en |aii«l» civil de 
hi9 depai'taiueiitos de la Francia* Lottdres , au^ 
toru del Iratado de Piliiitz , de la division de 
la F rància , y de la Iriplé alianza del Alorte; 
Londres , cui|Hible del sistema cspuntoso de las 
^uerras ctviles y continentales j de un latro^ 



84 

cinio universal , y de birbaros asèsIíuitoB ; do 
la íotrigpa , y de la veiialídad mas escaodalusa; 
de la esclavitud marítima , y de la vlolaclon 
constante del dereclip de gcntes ^ Londres qae 
ba deg^radado y corrompido la política de la 
JEuropa , y ultrajado à todo cl g^énero hninano 
^ como pucde existir por pnas larg^o tiempo en 
el rango de las potenclas Europcas , sln mudar 
de gobcrnantes y de goblerno ? 

Venècia, republicà foroz y aristocràtica, podia 
jtnrbar la tranquIUdad tie Itàlia. Londres^ monar- 
quia devor^nte y perturbadora, quiere destruir 
todos los dercclios y la Itbertad de la Europa , y 
tratar como csclavos suyos a todos los pueblos» 

Venècia fue solamenie Industrlosa por sus ha- 
bitantes, liàbii eu su comercio, y pèrfida en sus 
rçlacloues políticas : ella pereció. Londres a- 
barca y devora el comercio de las cuatro par- 
tes del mundo; extrae las riquezas de todas las 
inaclones ; concentra, sobre nn corto y mesquino 
puiito del Oceano , todas las fucrzai navales, 
todas las riquezas cFectlvas, todo cl poder polí- 
tico , y toda la influencia del globo : la aul•^ 
ma y dirig^e , al mismo tiempo , el mas atroz 
maqnlavelismo. ^, Subsistirà , pues, largo tleni: 
po en este estado colosal y oprcsor ? 

Un momcnto bastó para derrocar y destruir 
en CampO'Formio ^ à la altiva dominadora del 
mar Adriatico t y un paso de las victorlosas 
falanges de la Fraucia, ó el solo genio del Heroe 
que la dirlge, es mas que suficlente para rayar^ 
en la Usta de los lleyes ; à ese pirata y des- 



88 

pota mercantU del Occano/ El mündo espera de 
8U9 manos el mas bello de los tríunfos, la rea* 
titaeioD del poder maritlino comun ; patrimonio 
aotíg^o y natural de todos los piiebloa/ 

CAPITULO 14. 

■ ■ . « ■ 

El podet Maritímo comun es compatible con 

todas las fotmas de gohierwo. 

Imag^inad nn genero d^ poder, que no allera 
de modo al{funo el prinéiplo^ la natnralcza y las 
formas de ningpan çobierno ; que concuerda eon 
ks JMonarquias de la misma suerte qnc eon las 
Hepublicas ; que puede convenir k las soeieda- 
des saivag^es tanto , como & las nationes t\\U 
lizadas ^ à los pueblos iiavegantes y t;omerc!an- 
tes , como a los sedentarios y «gfricoks ; qne 
«lantiene sin reyoineion , los derechos de toda 
Sociedad política j que {j^za , sin Tiolcncia , de 
las producciones de todos los paises y de tòdos 
los ' generós de indústria ; qne no exige ning^un 
gasto comun, ni esfnerzo alguno exlraordiuario, 
para la defensa y conservacion del derccho de 
centes / que no pncde jainas usurpar ni cseta* 
vizar ; que no neeesita de la fé de los tratadoa 
para ser justo, ni «lel aparato de la fuerza para 
uiaRienerse en tranquilidad; uiie sigue las núsmas 
leyes' dcsde el ttno al otro Polo ; y que protegc 
con una mano poderosa é invisible a tòdos los 
•pabeHòttos, en los mares del sur, y en los del 



86 
Norte, en el Sfedltemneo t en el Baitú*or f 
hé aquí una idea vcrdailera dul poder inariiiuu» 
comun. ^ 

Tantos dcbícran ser , por lo mísmo , 6||^. de- 
fensores, ctiantoH so» Í09 |;ob!criios (|ue existen 
sobre la Itcrra ; y tantas Isa fuerzas de su apoyu, 
çuantas son las de los pueblos c|ue desean con- 
servar su libeitad, y vivir felices. 

^Porijuc se nos ba çoncebiclo, pues, basta abo- 
ra Ja empresa de orgaulzar m.edÍQS adeeuados y 
poderosos à inautener los dei*ecbos de este |)oder 
inaríUino coiinin ? Se ban bei^bo tantas çiierras 
para sostener elt eciuílibro de las Poleo^^ias , y 
lantos tratados para conservar la bajfiusa de la 
Europa.... ^ Y que ba resHl^do? todo fi^e ba 
licebo para cl bíen particular de algunas fainllias^ 
y nada ^ nada para ei ^enei'al de las naciofies. 

Se ba consentido una acta de naveçaqion en fa- 
vor de. un solo g^oUerno, cn^ando debjla baberse 
proelamada una afi-'ta universal de navega^on pata 
el uso iie loHos los pueblos• 

Si las füerzas navales de eada naeioia fneran a- 
nalonfas a su fortuno; si la marina inililar de eada 
esfado fuera llmilada por ona ley general•; si los 
armameiifos inaritïnios fneran propopcionados à las. 
necesídades de la defensa , v a las rentas de cada 
gobierno, no se neeesltaria de un sacndlmlent<ft 
polítlco, en cada si^io^ para obligar à mia poten- 
cia usurpadora a doscender de la eminente cum. 
bre de la grandeza desmesurada y formidable, dea- 
dé donde tlraniza a la tlerra y a los mares* 
\Eigoliierno de Constanünoplatendría entouces 



87 
tantos dereclios maritimos y comereialeft, leèmo 
el de Francia. Caillari pei»aría fàlito tomo ^iiú^ 
dres y eu la balanza del puder niaritittiò^ f Ú de- 
recho de g^eule^ no seria rcputaito , èuilít» ía lia sí- 
dü llasta aliora , una simple y noniínaí ({ulinera. 

IVo està iejos la època de esta revotaeíou. £Ma 
se veriGcara , desde el momeiito en que \tl poder 
marltimo exclusivo , à fuerza de habc. corrompí* 
do y deg^radado à la nacion que lo exeree, lle* 
gue i provocar , cou sus crueldades y pirateria», 
a tòdas las naciones eontiueutales , para que uui- 
das la. derrlben. * 

CAPITULO 15. 

El poAer marilimo exclusiva corrompé 

todo genero de gobiertio ^y no se 

acuei^da con ninguno. 

Corromper es la propiedad coostante deldes- 
potismo. He aqni la razou porque el poder ma- 

Enfili ;, llego esta època feliz: la Europa ha formado ya 
su empeuo decidiclo para abatír , entre las rocas ahtinia- 
dai de la insolcnte Albí on , al rnonstruo perturbador del 
ui|irer8o, que tantas yfceitiuió stit manoi en sangre bumafia. 
{PueblM del inundo! Esperad todavia por algunos momentòss 
mas; v le vereis rodar drsde la cumbrè de son JaMes, 
dcspedazado por el rabioso y vcbemenie remordimi- 
ento de tus crímene« , j ationadado baxo ,vl peso 
de la veuganza . y. la exc^^jraciou g(*neral de toda 
la tierra. \ Pueblos del niundo ! Es|>erad iodaria por 
algunos roomentos , y no tendvcis mas cpie torner de su 
•alfage fiereza, y de su alevosia y hoçriblcs atciítidot. 

I Dtstrujrase alGobiernoBritanicol 

£1 Tiaductor. 



Jritimo excíasiro ba siem^re alteració rapldameii• 
tt la naturaleza , el. principio y las rqlaciones dé 
los mejores {pobiernos. 

l^a sabiduria del Senado dè Cartago lia si do 
cèlebre ; los conocímientos y la foriuua de sm 
£peoeralés son conoeidos de todo cl niundo. No 
obstante, ni la sabidaria de aquel scnado, ni là 
fortuna de Anibal, ni cl fifcnio de Hannon, 
pudieron eximir à esta Rcpiiblioa del vcneuo cor* 
tuptor del poder marltinio esclusivo. 

Esté l^odcr es tan cmbriag^ado que ba dado à 
jhí aristocràcia constitnida todos los viciós , y tódío 
el org^ullo del de8j{k>tísnio. Tel se niauífestó la Re- 
pública de Venècia. El poder maritiino exclusi- 
vo la inspiro, en elsiglo 16, nna politicà astu* 
ta , y un orgullo iusoportablc: y si la bruxiíla fto 
la hubiese quitado cl ünperio dèl mar, ella lo 
liubiera perdido al fin, por so constante perfidia, 
y su orgullosa aristocra!cIa ; friito de sus riquezas^ 
y de su dominacíon exclusiva. 

Estc poder es tan corruptor , qne corrompé 
aun à la mísma corrupciou ue las nionarqnias dè-^ 
gràdadas. Vémos la prueba mas mcistva de esta 
Verdàd èn el góbiémo Brltanico* 

La libertad se manifesto , un sígio ba , en In^ 
glaterra, no obstante que las divcrsas faccíones 
la destrosaban*. se 1» conservado en los corazo* 
nes, a pesar de los repetides a te» tad os de uhihi- 
histerio feros y dcspotico: se descubren aun sus 
vestigios energicos en L•landa , baxo las persc- 
caciones mas atroces ; ca Est!Ocia , a dcdpccbo 
de la fulmtnantc proscripcion de los celebres de<> 



jl^enHèr^s* , y {*n la mísïha ïngiatérrísi , sïtï cmbarg^Oí 
yÍ2 làs òdíosas leVcs dè 179S, siibversívas de la 
libertad civil; y los Bilts*^ oprésores y tiran!^ 
Cí)d de i 798, rclativos al auiuento qnadrnplo dé 
tos impuestos y eontrlbncíocfes ][)iiblicas• 

La llígiaterra conlin^à, nó obslante, slendo 
el testlg'O iudíferénté 9 y cl iiisti'iiniento doéil de 
la scrvidúnibre y dcïsolat'JOii del muudo. Là 
lug^Iatcrita eontr'ibüye con tódòs sus bietics , sa 
pòblaciofi, siis fratos, y sa kidastm, y con stl 
marina 'destrnctbrisi al dcspoti^üio iiiisehsato dè 
su Rey, y a los c'apiíclios liotuícidas de sns mf- 
kiistrés : ella cifra su nacional org^nllo dn cl exe- 
crable prurlto de Itranizar los marcs ; rcduéhr 
à una colònia suya cl globo ; exterminar la 
Francia ; y- «sélai^zar a-todos-los yucblos. Debe 
«recrse , à yista de esto , que eliu {j^ime encor- 
vada bajt> el aaote del mas bai^baro de los tira- 
Yios ; y cjtte no <se atreve aun à recobrar la liber- 
tad , cuyo sag^rado fucgo arde eii el scuo dè 
todos los Britanícos que no se hallan absoluta- . 
mente prostitoidos y degradado.s. 

£sos , me iliran , son los efectos contagiosos 
4el poder marltimo exclusivo : iiingun piicblo 
pueiie eximirsc de cllos ; todos los gobiernos 
estan sujetos À su iniluxo. La monarcpiia de 
Tiro, y la i^èpiíblloa de Cartago <. la ^randeza 

* Ki nombre 6 &pe\i\àè <^n6 se da a los Kscoce ses qu^ 
t!cíien(]en ó proli^cn sus dciOchòs naturalcs. 

* * Lcy , rst-itiito, decreto ú ]iroyecto que se prescotià 
ai ParUii)«tito ile fúglaterra ])aTa su aj)ioLacbii. 



Bomana 9 y la ariafocracia de Venècia j h in* 
dustría de Holanda y la monarquia de Inij^U- 
terra : lian venido à tener la siierte ineTitaÚe 
gnc trae con %\go cl poder mariiiroo exelii^iTa* 
Grande y preciosa leccioà é las República» y 
Estado» uacieiilcs del liemisferio Columbiano!.... 
Tienen dclante de si el c»pectaeulo de ks Po* 
lencias maritlmas exclusiva», que lian derramado 
un diluvia de calamidades sobre el oniverso^ 
arrastradas. dcspues hacia el despotismo, y pre- 
cipitada» en la ruina 9 por el »olo peso de este 
ambicioso podér« Pera on espectacnlo todavia 
mas pavorosOy se les presenta en el poder 
maritimo excJusivo. insuUir^ 

mm W 



F»N DBI. LIBIIO PRlM&nO» 



91 

LA LÏBEUT AD DE LOS MARES , 
O EL GOSIERNO L\GL£$ 

DESCÜBIERTO. 



lilBftO 88GtJK»0* 



DEL PODER MARITIMO HVSULAR. 



CAPITULO PRIMERO. 

Origen y progresos y jf /in del poder maríihno 

exclusiva y insular* 

I Cosa singpuilar ! Ei poder marit^mo exdasi- 
vo, insular y acaba como comlcnza; la pirateria 
lo funda ^y la pirateria lo destruye. 

Pirata y tirano de los mares y tales son las 
divisas que marcan la primera y la últiuia època 
de las naçiones maritimas* El comercio es ene- 
llas un estado intermedio. 

Lc^ primeros piratas oprimen 6 interccptan v\ 
comercio,* y tus sncesores conquistan las islas, se 
apoderan del curso de los rios y y colooizan los. 
continentes y para comerciar. Se hacen mèneste- 
rosos y riços * no tardan en adqiúrir un poder 



9a 

grande^. ycn desplegar la amblçion y las rlyalí- 
dades : concluyen por cjcrcer la tirania y y p(^ 
Iiaeerse odiosos e intolerables. 

Sus primeras expedicSones fueron latroci- 
pios, sus ultimas operaciones son piraterias. Se 
establecen por hiedio dél tenlor , y pcrecen 
como vlctimas de sii injustícia. iL/a nccesidad 
Iss cria, y el orgullo los mala. 

Sns progresos son nxarcados por el comercia 
y la indústria: perfecciouan las arles, engran*. 
decen cl comercio , y muitiplican las comunica^' 
çionés de los pueblos. Sn decadència seannn* 
eia por la política y la dominacion. 

Al pi*incipio se apoderad del comercio raari- 
timo por niedio del bierro , lo pierdcn despu^»^ 
es por medio del oro; la audàcia es su primer 
paso, y la corrupclon cl ultimo. 
Asl pues ^ una espècie de latrocinlo de mar és 
la infància del poder inaritimo cxdusivo , visitlar. 

El cpmercio es su edad viril , y la ambiei- 
on su edad madura. La dominacioh exclusiva 
es sh vejcz, y la tirania bàrbara cl signo y él 
xnomcnto de su càducidad , y de su' mucrte. 

Estos periodos de domtnucion marítima son 
de una dü'aclon funesta para los pnbblos oprimt- 
dos sobre cl contineiítc , cuando permanecen eli 
im langnido Ictargo , üiegos , venales , corrom- 
pi dos poi^ làs pasi'ones , y dcgradados por la es- 
chivilud. El poder cxclusivo, /n^iifaT', pasa rü- 
pidamtíalc por todos estos pcriOdos* bn los si- 
gles de ItseeS y de liberUd: iiiia politicà sa- 
ga k, tfabHmcnte ct)mblnada, 'y poderosamentc 



^ «5 

«cgnida, paede retardar por algan tiempo si^ 
uiarclia : però cuanto mas 8C lia refioado el aiy 
fe , cl maqaiaveUsmo ó la TÍoIencía para ïnante* 
ner y conservar estc poder maritímo exclusiTO^ 
fanto mas acelcradameote ^e Ic ve córrer a sii 
precipicío y ruipa^ cualquiera que baya ^íAq 
»n oríg^en. 

■ 

CAPITULO SEGUNDO. 

DiferetUes origines (íel poder 
mariltítio exclusivo. 

Yp pong^ el comercio en primer lagar: rl 
^s la f^enic mas ordinària y mas fecunda del 
despotismo marítimo. El ,coiuercio dló grandc9 
Tcntajas i las naciones , però las dexó tambicn 
^1 azote de la amb'iclon mercantil de Tiro, la 
fe púnica de Cartago, el orgullo insolente de 
Venècia, y la tirania universal de Londres. 
. La poliUca dió pnncinio al poder maritlmo 
de Atenas , que sembro la discòrdia y rivalida* 
'4c8 sangrientas* fntr^ las Bepublicas Griegas. 

El luxi^ fue el prigen del poder maritimo 
de Roma « y ^1 inisnio laxo corompió al mun^ 
4Jq que ella dominaba. Corrompió de igual mo^ 
do i sot seSores ; y es el nnico bien ' pòsitivo 
que ocasiono à la tiçrra? 

^ Quten podrà imaginar que la religion fdese 
anq de los origenes principales del poder ma- 
ritimo exclusivo? Hubo tiempo en que los Pa- 
pàs j desde la sala del Vaticano, repartieron los 



04 

mares entre diferentes Potcncias, y traxaronV 
en níoinbre de Dios, una linea de dcmàrcacton 

Íde servi duinbrc , sobre las olas agiladas y li- 
res del vaslo Oceano. 

Todos saben, que Venecin no poseytS si no 
riqnezas y ori/ullo ; y este foe el mauautial ani* 
c» de su poder inaritimo exehislvo. 

No babio del dispcudiotio poder inaritimo de 
FelipeS.^ »ní de la soperloridad riiiuosa qne ob- 
luvo Luis 14 y sobre el mar. Uuo y otro no hi^ 
eieron ver si no ràpides y fug'itivos relampagos 
del despotismo. 

Si yo piidiese abatirme à la vil deg^radaeion de 
celebrar el origen del poder maritinio exc.insivo, 
diria algo de csa naeiou ecouoma é ini!•»Ui*iosa^ 
que a un tiempo ereó su territorio y su libertad, 
sus eolonias y su comercio y su marina formida- 
ble , Y su iiavegaeion útil. Elevada d^àde cl bondo 
scno del Oceano y por su genio eiiiprendedor y 
laboriòfKO , teudria mas dçrecho que otra ninjfu* 
xia potencia, à surcar las ondas, con su ma- 
rina. 

Yo me apresuro i tratar de un pnnto mas 
interesante ^ corro & bablar de ese gobierno bar* 
baró en sus priucipios, atroz en su ambicion^ 
perfido por su política, funcsto por sus alian^ 
zas, y tan dèbil por su egoisnïo polilico, co- 
mo por su posicíou insular. Kncnentro en ella 
renniou de todos los manantiales del poder ma- 
rí li mo exclul•livo j de esta , ban brotudo todos los 
viciós que lia conmiíicado a las naciones , todos 
los peligros y vexaciones que lia becbo su- 



»8 
frir I la Iibertad del mundo^ todos los obsta- 

«ulos ffue hi paesto al comercio , y todos loà 

males de qne ha colmado à la trlste buinanidad. 

Observad el poder maritímo de la Ing^laterras 
cl saca su origen simultaneaiBcnte del comercio, 
de la política , del luxo, de la superstícion, del 
orgullo 9 de las riqiiezas , de la indústria > y de 
la guerra; y à todo eslo dà una fúcrza mas 
poderosa y muclio mas funesta por su situa* 
«ion insular* 

2 Que korrendo y pavoroso resultado no Iia 
visto el mundo de esta violenta y asombrosa 
combinaeion ! {La tirania universal de la tier- 
ra y de los mares ! 

Un. tiràno* famosp puso, en 1655)Iosfnn^ 
daiueatos de este insolente despotismo con sa 
acta de navegaeion, y ttatd a todos los jweblos 
como encmigos , por que hablliba k nombre de 
Un pueblo insular. 

Una Icy, en. cor tos rengloncs, asejj^ró al 
pucblo tírltanico , todas las producciones de su 
comercio « y las de sus colonias: esta ley exclu- 
siva le bízo prontamente seíior de una gran 
partc de las producciones de lo^ otros climas, 
y de la Indústria de los otros pueblos. El Esta- 
do insular facilito la execuciuu de esta ley de 
usurpacion, y de tirania. 

La EaiHipa estaba cicga y aletargada ; y el In- 
glés (juc fúé el primero que desperto, se apo- 
dero de todO: mas su exi^uiplo no hizo Impre* 
siou sobre las utras naciones. 

* ÜJiver Croinwril. 



m 

.Si cada potenciar coatineBtal Iiubiése imltadoi 
jíX g^obierno BciUníco, y hecbo observar en 
911S puertos nna o^cta. igual de navegaciím , eaAo 
gobierno çio bubícra usjirpado el Imperio despo- 
tico sobjrc el mar, ni preparado» diu*ante.un sU 
glo de prospcridad nacional, y de ceg^«uedad Ea- 
ropea , las fiicrzas navales propias à perpe]fcuar sa 
monarquia nniyersal. 

La Fvancía no tarctó en abrír lo» .ojos 9 elU 
promnlg^ó ultlmamcntt; òu acta de navegacions 
y esta prevjsion juata y. si^ia ha ilustradlo à Li 
£aropa , y la dispone para la acta necesjsiria de 
naveg^arjou general. 

Solauiente la cegpuedad 6 laa dif isiopes po* 
Jiticas de U Europa l^iibíeran podí do inspirar, 
en luuchas epocaa, a ciertos .princípes ó g^o-^ 
biernos, la idea fantàstica de la ii^onarquia uni- 
.Tcrsal , i que no ^e puedq aspirar Jjamas si na 
por los çriïnenea de un poder maritinia, L•isulfur^ 

CAPITÜtO TERCERO. 

De la monarquia li^iversaL 

Gonvienç e^tcnder la yista de tiempo en tiem- 

Ïo, como el gobícrno Britanico, sobre lo pasa* 
o para reglar iiiejor lo preaenie, y meditar 
aobre. lo venidero. 

{toma Christiana aspira , en cl siglo 1 1 , a 
la monarquia universal , con bnlas, con supers- 
ticiones, y con qn deepotiamo abaoluto, & qne 
dabnn el canicter de sagrado la ignorància de 



97 
los poeblos > y k imbecilidad de los Reyes. 
Gste era ono de los resultados trbtcs de là bar- 
bàrie de aquellos tiemposè 

La Èspana, en ei siglo 16.°, amarra à sa 




monarquia 

res de este dèspota , veug^arou k la Europa de 
tan desmesurada ambicion. Ella füé iino de los 
errores de la política Espanoia. 

La Francla, en el síglo 17% tió é la nata* 
Iraleza prodi{parlc una multitud de bombres g^ran^ 
des y al mismo tiempo que la Europa dividia 
sas fuerzas , y trabajaba por confundir sus pro^ 

Ïectos. Lnis 14^ consiguió ventajas brillantes: 
i Adulaciou le apellidó Grande^ y la política 
le condenó por la amblcion de la monarquia 
tutiversaL Era un vicio que babla bebido en la 
política Europea* 

' . La pat de Utrechi ^ que eii el stgio 18, fné 
el fruto de la division acaecida entre los ene- 
micos Gonfederados de Francla^ dexo à esta la 
preponderància sobre el Gontlnente* Desde aqut 
comienza la política astuta del g^oblerno Brità- 
BicOy que desdc esta època, no ba Cesado ia 
cianur ^ quo la Francia aspiraba « la lúonar'* 

S[uia universal* Mas , es to no era mas que aun 
antasma espcciosa d cuya cspalda se situabà el 
g^obierno Uriiànico, para dcslumbrar.i la Ett- 
ropa, y precipitaria en las calainidades de la 
^uerjra , cu coauto el org'anizaba para si ,s<do , el 
sistema de la monarquia universal sob^e los mares; 

7 



98 
La revolocion francesa sale impetnoMinente 
del seno de los siglos^ U apariciou de la Ae- 
publica asnsta à todos los Reyes de la Europa; 
y el g^obierno Britauico se aproTccha de es te 
momeuto de teiyor, los confedera^ y los precipita 
en uua lucha horrible y destructora. Este gobierno 
perturbador y maqníavelico usa entonces de una in- 
triga profunda, y vastamente combinada: cal- 
culando todas las consecuencías de la grande 
mutacion, acontecida en el suelo Francés, temió 
que pudiese acercarse la època en que se le 
arrancase de las nianos el cetro de la uionarqnia 
universal de los niares , que habla sido el fruto 
de su política y de sus crimenes : y en esta 
zozobra entre los furores de la rivalidad del 

{>oder I el orgullo obsequiado del despotismo, y 
as inquictudes punzantes de la avarícia , hace 
los esfucrzos mas extraordinaiios » T no orni te 
genero alguno de maldad y de infàmia^ para 
alejar el peligro que intimidaba à su lóbrega 
imaginaclon. 

CAPITULO CÜARTO. 

Efèclos tiahirales del poder Marithno eòmun^ 
corrompidos por el JfarUimo insular. 

El efccto natural del poder marltlmo comun 
es inducir los pueblos é la paz y é1 comercio, 
y a la prosperidad general. 

Dcbe producir una seguridad grande en todoa 
los Estaoos. 



09 

Las gnervBB qne emprende ó permite el po- 
der maritimo comun para el biea general de los 
pueklos ^ son siempre àrregladas à lòs pnncí- 
plos Santos del derecho natural y del de gentes; 
y por consecuencia mneho menos devastadoras 
que las de opresion y de conquista^ 

La guerra del mar debe, por su natnraleza, 
hacer una diverslon poderosa à las de tierra. 

Hay mucho menos revoluciones y calamidades 
en los Estados del Gontlnente, cnando la guerra 
se circunscribe solo é puntos de comercio con- 
tcstados entre las potencias maritimas. Esta es 
la venta ja y el efccto ordinarío que producé el 
poder maritimo comun. 

£1 Gobleruo Britànico , dueno del poder ma* 
rilimo exclusivo, por desgracia de la Europa, 
hi hecbo desaparecer todos estos resultados; y 
ha llevado la combustion y la misèria por todos 
los augulos del universo. No lo hiibiera podi- 
do executar 9 si no estnviese atriocherado con 
iiisolente orgullo sobre los fragosos penazcos de 
su isla* 

JVo debiendo ser las guerras de eoinèreio si 
no pasageras, y solamente respectivas à las na- 
càoncs maritimas, el gobierno Britànico ha tra* 
tado siempre de eternizarlas , y de hacer sa 
estrago comun i todo genero humano. Ved aqui 
la causa cierta por que ha turbado continua- 
menle la pas de la Europa y devorado su co- 
mercio, y paralizado su prosperidad. Ved aqui 
por que no ha ccsado de sembrar peligros , di- 
visiones^ corrnpcion y crimenes eumediodeto* 



100 

dos los pneblos. El ha dado à las gnerras de 
comercio - la luísuia frecoencia que a las de la 
poliírca , y lia keoho recaer la principal calamt-! 
dad sobre el qoe juslamente se deíiende* Ha 
ciibierlo el CoBtiDente de deTastaeioues , y de 
gaerras civiles y extrangeras, para imposibili- 
tar la Biaritiiua, y usurpar de esta manera mas 
facilmente el imperin exclnsivo. Ua revolució* 
nadó à los Estados mas considerables de la Eu- 
ropa y con el objeto de entreienerla , y distraer 
su vista de las revoluciones espantosas qoe cl 
verificaba en las colonias , y en cl comercio pu- 
blico de las naciones* 

Con este perverso sistema ^ el gobierno Brl- 
tanico ba alterado^y corroiupído fa naluralcza 
y, los cfectos del poder marit: luo g^eueral ^ y ie 
ba düdo todas las violeiicias todas !as iiijusticias, 
y toda malignidad del poder marítimo exclnsi\«iy 
por que le lavorecía la imponidad qoe le propor- 
ciona sn situacion insular. 

. Vemojs, consecuentcmentC) que para este gpo- 
blcrno atroz es una espècie de juego y de re- 
creo, el precipitar à los cont^lClitcó en las guei*- 
ras m^s fuuestas , y en las dtvisiaucs mas terri- 
bles y desasU'osaS) el extender , a favor de es- 
te incendio pavoroso y destructor , so domina- 
cioii tirànica sobre todos loí» maics j el tracr y 
devorar solo las riquczas que piuduce cada país , 
y.apodcrarse eiLcludivameiitc de la navegacion 
qfie dcbe bacer cada pucblo, euiplcaudo sus 
fuerzas uaturalcs, y las de su comei'cio y su 
iuduslriuj el auuieutar su poder por medio de 



las rïqaezas, y aus riqnexas por medio dci p|^crj 
cl cogcr 80I0 todas las venta jas^qoe se poedcn 
sacar del abatíinieíito y debilidad de las potcn- 
cías mas considerables ] el eng^ordarse , por de- 
cirlo así , con la subsUíncia de todo^ los pucblos, 
coya roina perversamcnte ba labrado; el g^ozarse 
en medio de las calamidades generales ^ que el 
mismo ba difuodido sobre la faz del globo ; el 
aprovecharse, para dar mayor vuelo a su des- 
potismo, de la» incltnaciones y babitudcs Ticie- 
sas del corazon humiíao ; el armar en su favor 
à todoa los erimeues'; y aaalarlar a todos los 
viciós. 

Conclayamos , pnes , que cl estada insular 
proporciona los progreaos mas répldüs al poder 
maritimo: comienza por inspirarle el vil cspiritu 
de la pirateria ; le acbnseja en seguida el de la 
conquista 9 Ic asegnra los medios de la ambicion 
comercial j le «arrastra a la invasion de los paises 
remotos, y al eslablecimiento de las colonias 
en todas las regiones de la tierra^; y le sub* 
ministra el genio , los insfrumentos 9 y la im- 
punídad escandalosa de la tirania. La política, 
pues ,' con el convencimiento mas lummoso y 
perfecto , debe persuadir à todos los gobiernos 
libres 9 quo les importa tanto como su (existèn- 
cia y su libertad : el impedir que se debilite la 
influencia natural, que del|e tencr el continente 
sobre las islas. 



109 

CAPITULO QUINTO. 

Refleccion política. 

Un Estado insnlar es siempre débïl y dcpea- 
dïente por su nataraleza. Se halla abierto por 
todas partes é la ag^resion : neccsita continua- 
mente de las |>rodacciones del contínente, y de 
la proteccion de sns arinas : però si iog'ra salír 
de su debllídad, formando nna marina , y cxten^ 
diendo sa navespacion, adquiere riqnezas, y saie 
prontamente de la independeneia. Ved aqni como 
se forma sa poder* 

Si agreg^a al poder de las riqnezas^ el de la 

Eolitica , conviertese lueg^o en arabicioso, y tar- 
alento ^ si à una g^rande navegacion , agreg^a 
nu sistema colonial, pronto extiende su influen- 
cia^ y quiere bacer preyalecer sa dominacion. 
Llega 9 en poco tiempo , é la eumbre mas alta 
de la grandeza , para no baxar de ella jaraas, 
si no por ona rai na total, ó por una conmocion 
terrible que agite à los otros E&tados, Asi cayó 
Roma de lo alto de su poder colosal para uo 
yolver é existir mas ^ y para abandonar la Eu- 
ropa é los bàrbaros. 

Siempre que un Estado insnlar resiste é las 
causas naturalcs de su debílidad y dependència, 
y consigue el poder niaritimo cxcluslvo , no 
puede abandonar de nítigun modo el imperio 
absoinio , cualquiera que sea la forma de su 
gobierno , repnblírano ^ ó despótico. La divi- 
síon de sus recursos^ y la de su tcrrttoriu , y sus 



103 

riqnexM j la re jaccion conTenlente de sa marina 
militar ^ y el abatimieoto continoQ de aa poder 
maritímo J son los unieos medios qne poeden 
impedir ^ que il continae , 6 ToclTa 4 ser ua 
dia el azote formidable de los otroa pucblos, 
y el tírano de los mares ^ 

No nos eng^nemos s h sitaacion topogràfica 
insular es de tal naturalesa y en politica, que 
no exíge de parte de un gobierno ni conducta 
ni esfuerzo alguno cxtraordinario para llegar a 
la cima de la grandesa y de la opulència , como 
potencia marítima. ^ Que seri , pues cnando 
un gobierno | sumamente eroprendcdor , lleno 
de ambicion y de astúcia , de immoratidad y 
de riqiiezas , se balla sitnado en una isla, y 
organiza constantemente sn sistema y sus medldas 
poUticas , militares , navales y coinerciales , di- 
plomiticas y coloniales , para engrandecerse 
de mas y mas, y dominar exclosÍTamente desde 
el ocaso basta los paises mas lejanos y descono- 
cidos del Oriente ? Sn política y sn poder son 
cntonces patentes y visibles, como su fuerza 
publica y sus dominios : es un cuerpo íirmc y 
robusto, cuando bicre, ataca y oprime; y pare- 
ce invisible , cnando se trata de descargar el 
goipe sobre su cabeza : presente en todos los 
lugares, para baccr cl mal f y ausente en to- 
dos', para sufrir el castigo. Sn posiclon insular 
(Constituïa, al principio, sn dcbilidad, y sn depen- 
dència de la roasa comiin y poderosa de los Es* 
tados Europeos: mas abora , despnes de sa 
emanci|Kkcion inesperada , y astutamente conse- 



104 
gnida 9 la misma * posicioa infiíilar ca la que 
çpstiicne 80 orgoUo, sa egobmo,y bu domi* 

CAPITULO e.* 

Conttnaacion |fe /a mtsma matèria. 

Quando cl gobícrno de una Isla , llegia à ser 
lia^taote foerte y poderoso para desprcndcrsc de 
la influencia del contuicnte y para inflo! i* cl inismo 
sobre el contioentc por sns iiouierosas escuadrag, 
por 6oe distantcs colonias, y por un comercio gene- 
ral; dcbe, sin d oda, elevarse à na poder grande y 
asombroso cnalc|niera que sea la forma de su constito* 
cnon, ó loB acoiitecimicnlos que pascn en lo interior 
de so país, 

Venècia justifico esta Terdad, en el siglo 15^ 
y Londres ia dcuiuestra en el 19. 

El Filosofo de Ginebra decia en sn tiempo, 
que el tenia un pre«cntiniiento de que la isla 
de Corcega vendria à':ser un dia la admiréei- 
on del mundà. Baxo este solo rasgò, nos liace 
concebi r las grandes ventajas que él conside* 
raba anexas a la situacion del estado insular.* 

Este mismo temor foc el que obligo à Car» 
tago é probibir en Cerdeiia y Corcega, el cul* 
tivo de los Campos; y el que la inspiro la atro- 

* No faltarà quieo dtga, qn« é\ profetizaba» tin peasario, 
rl nacimicnto del insigne jguerrerOj del Lombre extraordi- 
xiario , del inmortal h'eroe que dirigia d la Francia, y ha 
dado un nueyo brillo y aspectp à los destinoi dú genero 
)it)mano• 

£1 Traductor. 



to» 

cidad bàrbara de hacer abog;ar é los que nave- 
gabàiii en los marcs de Cerdeiía. 

J. J. Rúusseaus se lisonjcaha con una espc- 
ranza filantròpica: però los (]arta{i^neses obra- 
ron solanente por el sornbrío y cruel present 
ilmlento de las rivalidades del comercio, y de 
la nav^^faeion 

A estàs ventajas de la posicion insular, pne- 
de nnir facilmente un çobicrno las de ona po- 
lítica astuta que deslnmbre a los pueblos éoo 
el bechizo seductor de la modcracion, en cuàn- 
to la ambicion realiza su irasto plau. El cuga- 
na é las naeiones credulas, diciendolas: » Yo 
a nada puedo anadir à mi posicion uaturalj mi 
u territorio està.circnnscrlptoy circunvalado por 
«las ülas del mar. No soym puedo ser ambi- 
« ciosoj si tomo parte en vnestras disenciones ▼ 
<( altereados, es solamente para maotener el equí* 
u libro, la jostkia, y la igualdad de derechos 
« y de poder, entre los diferentes Estades. » 
^{^uien creería que este lenguag;e artificioko 

Ïudiese baber producido ^ en Europa , un siglo 
e profunda sedoccion. y dò^em devastadora? 
Quien ereeria que el çobierno Britanico pa- 
diese baber elevado, eorao lo habecbo, con el 
seSuelo de eata moderacion aparente, el enor- 
me eómulo de comercio y de colonias, de po^ 
lítica y de poder, que aun conserva con esean- 
dalo y horror del unÍY^erso? 



CAPITULO 7.*^ 

De la falsa modera^ion de este poàer^ 

El Pader maritimo insular tíene nna apari- 
cncía de moderacion qse seduce y ença&a a los 
•tro» pueblo«4 

El no ticne plazas fiicrtes, ni exércltoo de 
tierra^ ni se balla en sitnacion de poder aa* 
mental y extender so suelo. Se dirà qoe este 
poder no a^ira mas qïie k existir en la obscn- 
ridad^ y é excrcer on simple cabotuge. No os 
díexcis alacinar: no hay un poder inas avaro por sq 
mluraleza, ni mas amb!ciosO| mas nsurpa^^r^ y 
ma^funesto» 

Sua plaza» fberte» no estan sobre sos firoii« 
feras^ però en sus numerosos puertos, en todaa 
las tostas, y en todos los mares, k la emboea* 
dura de todos los ríos, y al paso de todos lo» 
rsCreekos^ sobre cl punto de díreccion ó ram- 
bo general de todas las flotas, é la corriente 
de todos los vicotos, y a la boca de todos los 
0olfos. 

Sus esércltos exi&^cn en sus escnadras. Cada 
nav'io encierra una g^narnicion 9 y es uoa plaza 
fuerte j y cada cscuadra es un ejfccito. 

Sus tropas son las de tmlos. los Reyes qne 
nnan la guerra , y eodician el oro. 

£1 espiríiu del ejército existc en sos marinerosj 
y el de la eonqoísia en sus cscuadrao. 

Como su territorio esté separado y eírcnns- 
criplo por el mar, la polUíca tic los n^obicrnos 
coutincutale» no descubre allí la facilidad de ex* 



107 
tender ks froníeras , ni la posibilídad de aa- 
incntar el tr*rritorio ; però se eng;ana , por^ne 
el poder maritimo estabíece sa snelo y su inpe- 
rto sobre el* mar , y desde él enseiiorea y es- 
claviza à toda la tierra. Cada dia se posesíona 
de este Tasto imperio con su marina; y cada 
dia extiende al antojo sua fronteras. Qolso apo- 
derarse , una tcz , del Mediterraneo ; y à no 
ser la oposicion de los Turcos, bubiera conquis- 
tado el lliar-]Vcg:ro. San Peicrsburg^o, cediendo 
à la pèrfida y halagacna aqduccion de sus g^rfin- 
des subsidios , le lia integ;rado el Baltico ; el 
Mar Germanico estii à sus piicrfas ; corre iibre- 
mente 9 y a medida de su voluntad , por todo 
el Mar Pacifico j el Oceano , dcsde al nuo à 
otro polo j forma su dominio ; y nadie puede 
entrar en el Mar del Sur, sin su permiso, A 
la otra parte de estos mares , existen colonias 
inmensas , numerosas , y opulentas 9 que este 
poder exclusivamente beneficia y tiraniza, devo- 
rando sus riquezas. 

Si el poder maritimo insular , no posee ter* 
rltorio en Europa que pueda extender y aumeii* 
tar, el Àsia , el Àfrica 9 y la America le indcm- 
nizan largamente de esta circunscripcion y lo- 
calidad marítima. SI parece moderado en Europa, 
es usurpador en 11 America , cxcIusíto en la 
índia j y bérbaro en el Àfrica. Én la Euro|)a 
dice , qne solo quicre. mantener cl equilibrio 
comun ; y al mismo tiempo pone à su favor, 
en los brazos de esta balanza reguladora, las 
tres partes del mundo que exclusivamente do- 



108 

niiiiay Y cuyas riquezad dcposita ensii capital. 
Alimenta , eii la Europa, la maxiiiia^ y las f 4>c- 
ciones coiitiiiuas sobre disputa de antiguos limi- 
tes; y entre taikto exticndc y funda los suyos liasta 
Jas extremidades del globo. No liace muclio que 
se lipoderó & viva fuerza del Cabo de lluciía- 
£speranza, y de la'isla de Ceilan; y con la nih- 
ma politica devoradora con que habia tornado an- 
tes à Gibraltar, y cu estos ültímos tiempos todas 
las poscciones y puntos que ha podido en el 
nnevo mundo, y en el Oricnte, no cesa de cons- 
pirar al despojo de lo poco que queda i sns mis- 
mos aliados, clamando ai misuio tiempo, sin ru- 
bor, que la Francia es inicua, y au ambicion In- 
tolerable, à causa de los nuevos y naturales Un- 
deros que La recobrado en Europa. 

Quando se mira superficialmente la inmensi- 
dad prodigiosa de poder que ha llegado à conse- 

Íuir la Inglatcrra, por medio de su comercio, 
e sns colonias , y sus fuerzas navales, el hombre, 
pocó sensato y reflexivo no dudarà de creerla in-, 
mortal: mas, penctrad en lo interior de su polí- 
tica, y no hallareis si no una orgullosa y horren- 
da tirania, agonizando ya sobre la orilla de sa 
preciplclo, y de sn ruïna. Asl, la vista del via* 
gero que contempla con asombro las altas pi- 
ràmides de Egipto y no descubre en el fondo 
de ellas mas que el tiimulo sombrío de un 
Bey. 

Tal es el destino de las potenclas maritimas 
que signen los pasos y la ambicion llimltada del 
goblerno Britanico: el estado insular coluea i 



r 



109 

dtos gfobiernos bajo los lóbregoli anspicios de 
un mal genio. 

CAPITULO 8.^ 

Viciós naturalmeníe anexos al poder 
maritimo insulavk 

La potencia qae dcsdc nna isla doiníoa los 
nfiares ^ y por cl comercio se ha Lecho un colo- 
so icioiible de poder y gfrandeza ^ existe siem- 
pVe agitado por los zelos y por la ambicíon. 
Como 110 posee las venta jas sólidas j y la riquc' 
za nataral de los paises continentalcS) procura 
cnsciiorear ó destruir à estos ; y elevarsc sobre 
SHS rulnas para ser ella sola la que mande ^ y 
dé leyes al uiilverxo. Extiende su pro^perídad 
y sn fortuna brillante sín qozslv de ella soU*• 
damente eu lo interior* Siempre inquieta « ca* 
vilosa , y guerrera , ella siembra la mala fe y 
la intriga en todas sus relaciones. 

La sed de conquista ^ y la ambicioh ardientc 
de mandar , son las rcsultas consecncntes de 
sus progrcsos asombrosos en la navegaeion y y 
ca cl comercio. No busca al principio , si no 
consumidores de Su indústria , y concluye no 
rcconocieudo si no vasallos. 

El sistema de las colonias la scdnce , y la ar- 
rastra , cou brillante pompa, basta el borde de 
sn mina. Ella se componc loda de marineros 
y negociantes, y de egoistas y esclavos. No 
existe si no por Jos manejos tortuosos de una 



110 

política pèrfida y destroctora^ haclendosé odiosa 
por su marina, y no desciibrlendo mas que usu- 
ra y mouopóllo en su comercio. Reposa sobre 
los elsmentos de la tirania universal j y no se 
e.ig^randcce si no con los dcspojos y la ruïna 
de los otros pueblos. 

Los tratados que forma con las demas poten* 
cías, son funestos siempre a estàs , y favora- 
bles à las nilras de su amblclon. Se diria que 
ella no trata con los demas pueblos, si no baxò 
el caràcter de enemigos^ atenta siempre à repe- 
lerlos y alejarlos de sus puertos, y à usurpar 
los a{|[cnos. 

Se dina que uo trata si no coti csclavos; pro - 
hibi.cndoles todo g^euéro de indústria, y obligan- 
dolos à depender servllmente de su comercio. 

Tal es el objeto principal de su conducta, 
y el misterio jj^rande de su política. Ved aquí 
por que ella naturalmente se Lace intolerante, 
injusta , y altanera en su procedimiento, y en sus 
relaciones exterlores. VedaquI por que esinso- 
le»le y usurpadora; y por que no respeta lasleyes, 
ui la buena fe de las naciones. Como puede llevar 
la fig^reslon facilmente por todas partes, ella in- 
sulta al genero humano, desde que le acomoda, 
ó Intercsa a los càlculos de su ambicion y orgu- 
llo, sobre los diferentes puntos de la tíerra. 

Todos temen su amistadj todos temen caer en 
su odio, ó tenerla por veciua. Todos tiemblau 
ó descouCan de ella, basta el momento en que se 
quita la màscara, y se presenta descaradameute 
cpn el cctró cspantoso de la tirania, fiutonces no 



111 

se le temé: los pueblos todos se coninueveu; íút* 
manunempeno general para su extermíuio^ y eUa 
eae* 

Ea esta époea ya no puede sedttctff à las nacl- 
onesí se conoce perfectamente cual es su obgc^ 
to, y cuales son los principio» detestables (jue la 
dirigen* Se conoce, qne si ella iiene euibaxado- 
res, es para intrigar y eorromper; es para inflair 
y dar la ley, y para ser el centro de las relati* 
ones diplomaticas* A nadle se oculta, que si ella 
inflama y sostiene la guerraj si la propaga ó la fo« 
menta en medio de las otras naciones, es para ser 
el arbitro de la paz, y arrancar nucvos despojos, 
Taliendose de lasituaclon dèbil à que bareditcido 
las poteuclas bellgerantes. Sus negoclaciones se 
dlstingnen siempre por un esplendor pomposo 
y afectado; y sus tratados respiran siempre «1 
contagio de fa mala fe, y de un interès insaciable* 
Verdad €s, que ella bace pocos tratados; pcrp to- 
dos los que conchiye, la reportan siempre consi- 
derables ventajas. Qbservad sn conducta en las 
diferentes€pocas; y verels que ha influido siempre, 
y formado negoclaciones y tratados mas bicn pa- 
ra destruir y aniquilar à las otras naciones^ que 
para conseguir y asegnrar la paz. 

Dicta leyes imperiosas y terribles al comercio 
de los otros pueblos, y no las admite, ni las su- 
£re de ningnna potencia. Se ocnpa, pues, de la- 
brar eontinuameute pesadas cadenas ai comercio 
(general; tramas y lazos funestos à là política de 
las otras naciones; princlpios de inmoralldad y 
corrnpcionàlos otr<^ estadosj probibicioncs vio- 



112 ^ ! 

lenta» i h mdastria extrang^era; las calàmidades 
de k {pnerra à todos los pqeblos del tiinodo; 
y prccípicios por donde qaiera qoe impriDié 
sos desastrosas Luellas* llfas con toda esta po* 
litica, y este poder iliinítado y dcslumbrador^ | 

no puede evitar sa pròpia rainaj y se desplo* 
ma como un edificío bríilantc y {^randioso, à 

3 nien derriba cl inismo peso de su enorme y 
esproporclonada mole* 



CAPITULO d. 

Pélyros del impcrio del mat» ^ 

El imperio del mar ha pcrdído a lot g^obier- 
tios qae lleg;aron à conscgairlo y à asnrparlo^ 
despues de haber oprímtdo à los pueblos que 
lo han soportado ó pcrmitído : y esta . es nua 
Icccíon^tíl à las nac!oncs« Ninguna potencia ó- 
nacion^ por grande y formidable que sea^ puede 
dar largo tiempo la Icy à la Europa ^ y macho 
menos à todos los pueblos del Univcrso. 

La ambicion arruina à las naciones de la 
misma sucrte que à los indivtdnos •* però la del 
impcrio del mar es la mas insensata de todas , por 
que laslineas de dcmarcacion^y los linderos de las 
jjropiedades se forman en él pòrtics buqncs de 
cada nacion, y Mcsaparccen incesantcmeiite por 
ei cboquc de las olas Cf^pumusas de este fiero 
elemento. ','* 

Un espiritu de vertigo ha rcprcsentado & iTife- 
. rentes gobicrnos aniiguos y modernos ^ coi^lp po» 



115 

sible 9 la empreda de someter y consertar el íiii* 
perio de loa maces. Vcd a(|ul lu que ha causa- 
do la roina de lantas potcncms iiiaritimas^ y heclio 
desapareeer de la faz del globo taatas ciudades 
florecíeutes. 

Estàs org^iiüosas metropoles engauaron por al- 
gun ticinpo d sus vccinos: afectaroii pruteger- 
los , y Guiïnarlos de riquezas ^ à fia de . escla- 
vizarlos y labrar su ruiua. Tal es la luarcha del 
GoincrcLO ^ y tal es su política , cuando lo dii^l- 
gc usia naclou poderosa y iniliiar ^ y astuta^ ó 
atriaclierada sobre las rocas de aoa isla* 

Cs^s iiaeioncs ^ dadas à la navegacloil, pros- 
pcraroii al priucipio^ baxo la màscara artificiosa 
de la moderaclon y de la iudustria. El tuutido 
las considero como defensoras de la libertad y 
feiicidad comun de los pueblos , creyeado qc*. 
-el las uo traiabau si no de eslablecer el e<|iií- 
librio y la igualdad natural entre los pueblo:! 
iudcpeiidientes. He aqui los peligros à que íu- 
duce este fatal imperio , en perjuicio de v.j 
nacíones que lo míran eomo simples cspcola- 
doras , ó con demasiada paciència. 

Con todo , una idea cousolaute se ofrccs a 
la imaginacion : todo poder ■ inmoderado y ar* 
bitrario se destruye por si mismo : El oqi;ulio 
de los goblernos exclusivos prepara y aeeiera 
su caida cou su mismo egoismo y eonducta desak*- 
reglaila; y cou su política altanera y usur^ia* 
dora. Asi es como la tirania del poder mari* 
timó intular* al^c cl odio general del muudo, 
y devora el comereio que fingc proieger. 

8 



114 

CAPITULO 10. 

El poder marítimo exclusivo dpéiruj/e 

al comercio. 

Es GO§a bíen notables este poder tiene eàsl 
siempre^ por origen, al comercio y las rlquezas 
que insaciablemente busca , y sobre qoe fnnda 
Sil grandeza, su esplendor, y su orgullo* No 
obstanie el arruïna y destruye al comercio, 
por que lo estanca y lo monopoliza: obstruye 
y seca sus mejorei fueiitcs, por medio de los 
mismos e:^fuerzos que bace para apoder^rse de 
todas ellas. 

El comercio , que debe estar fundado sobre 
las necesldadcs rcciprocas, y el trabajo útil de 
]as nacíones , toma una graude extcnsion , cuando 
no eucueutra obitàculos, y sígue Ubremente 
su curso natural. El poder marítimo exclusivo 
se empena en arreglarlo^ y en dirigirlo à la 
fr^ia medida de su intei*es, 6 de su fantasia; 
y concluye esclavizaudolo , c6n el mayor des- 
potismo 9 y la ambicion mas frenètica* l Que 
es lo que resulta de este procedimiento ? Las 
necesidadcA reciprocas de los pueblos seliallaii 
substituí das. por uua codicia tan devoradora co- 
mo Insaciable; y un sistema de latrocinio, y 
todos los bor ro res de la misèria pública suee- 
deu a la iiidu.4tria y al trabajo de las nacioncs. 

Es iudubitable, que cl comercio no puede 
floi'ccer si no a la sombra de la libertad; y 
no lo es meuos, que el poder maritimo exclu- 



T 

US 

81T0 existe solameoti! por sn despotismo sobre 
el comercio. ^, Coino dcxara, pues, de ença- 
denarlo , impedir bu» progrcsos, y abogarlo en 
sus mas copiosos uianantiales ? 

La paz es el grito (jpcneral del comercio : es 
la primera necesídad indispensable para sn exis- 
tencia ^ y enya falta le ocasiona la mberte« El 
poder maritimo exclosivo no puede jamas pre- 
cindir de la g^aerra; procura encenderla y per- 
petuaria, por que la paz es un veneno para 
' su comercio* y se opone diametralmente À los 
secretos de su politica. ^ Que dígpo ? £ste po* 
dcr se eleva de continuo sobre las calimida- 
des y el trastorno del mundo J y es un estado 
que tiene, por bases fnndamentales , la in jus- 
tícia , la violència y un manantial inagotable de 
vexaciones y de estrag^os , mil veces mas funes- 
tos que los de la (j^nerra* 

El comercio une à los diferentes pneblos de 
1 1 tierra, y los enríqnece , los ei viliza , y los llus- 
tra por medio de la comunicacion recíproca. 
El poder marilimo ctccIímívo lleva por todas 
partes la rapacidad, la mala fé, y los crlsue- 
ues: corrompé, degrada, arruína^'y opi'ínic. 
Una espècie de prestigio le ainciíia, y Ic eícga; 
en medio de su graudeza naval , este mi^tno 
poder corta por el pic el arbol froudoso del 
cosncrcio, sin aprovcüliarsc de sns frutos. 

Qiiando se ve desde Icjos à una uaeíon ma* 
ritima exclusiva , se diria que ella es sin dnda 
la mas industriosa , y la mas comerciante que 
existe en el mnndo : però ; Que engaiio ! pe- 



ne 

netrad en ans talleres , y en medlo de sus ma-* 
nifacturas, cuando las otras naclones quíercn 
excluirla de suè puerios^ ó amenazan sus lio« 
g^arcs; eotonces, su inisma indústria la oprlmc: 
su comercio es ua peso à que no puede resis- 
tir ; y su poblaciun vegeta en la ini&er!a y de- 
solacion general. Ella usurpo el comercio de 
los otros pueL•Ios^ y estos reunidos aLora pa- 
ralizau el suyo. Ast los males que el poder ma* 
rijlimo cxclusivo liaee al comercio^ y que pa« 
recen darle la mavor exleusiou, \íenen i ser 
un aj^otc y uua cala::ndad cuiuun, quereflinc 
ultlmauiente sobre su ruiua y exterminlo propio. 
Dura mas ó iiieaos en razon de tu pusiciou , 
continental ó insular. 

CAPITULO 11. 

Causas que modifican 6 destruyen el poder 

nuiriünio exclusiu t . 

Quando una Potencia maiitima es insular , 
se abalanza y se precipita rapidanieute al des- 
potismo del comercio , y à la tirania de los ma- 
res , que parecen asegurar su inipunidad* Eslo 
es lo que ha succdldo à la Inglalerra; 

Quando una Polcneia marítima es continen- 
tal , eiicuentra , par el mismo Lceho de estar 
unida a la tierra , un reuicdio temible a bu ti- 
rania sobre los mares* Esto es lo que sucedió 
à Atenas , d Carlago > y a Venècia* 

Como el gcbieruo Britunico ea insular , cl po-r 



117 



see I en sa localidad, lo6 medíos borrorosos de 
insultar, y de liacer mal é todo» los pneblo»; 
de conaUtaíree daeno y arbitro de tedos los 
canales de comnnícacionj y de asediar é todoa 
los continentes por el liambre , la pirateria ^y 
las Tioiencias mas pavorosas , antes que se le 
pueda hacer danò en sus boga res mismos; y 
antes que se le pueda arrancar el odioso triden» 
te con que domina y esclaviza à todos los mare». 

Atenas tenia sus poscsiones sobre el con- 
tinente; y cnando ella invadía las regiones dia* 
tantes , sus enemig;os penetra ban en la .^tica, 
talando y destruycndo su bermoso suelo. El 
estrago que cntonces sufria , en las ticrras Ati- 
cas, modificaba su ambicion; y se veia obli- 
gada à córrer é la defensa de sus propios ta- 
res , abandonando las empresas con que oprimia 
à los agenos. 

Gartago , fundada sobre el contlnente de A- 
frica, no suspendió cl excrciclo de su despo- 
tismo maritimo , si no cnando los Romanos , 
acaudillados por Sciplon , conienzaron a lalar y 
destruir sus mas fcrtiles campos, y ricas po- 
'sesiones. Las victorias obtcnidas, sobre su ter- 
ri torio de Àfrica , preparar on la caida de sn 
orgnlloso imperio: ella vió, desde este nio- 
mento , disipada su dominacion y quemados sua 
buques , rcducidas à cenizas sus colonias 9 y de* 
nolida su bàrbara capital. 

Venècia pereció desde qne fueron invadidas 
sus posesioncs de tierra-firme. Si la Franeia no 
bubicse desde Inego hecbo eaer sobre ellas •« 






118 

exercito veoceilor, Venècia teiimria aati sobre 
el Adriatico, oprimieiido al pueblo, socorricn- 
do à la coalieioQ Britaoica, y apadrinando la 
causa de los tíranos. 

Londres no puede eximirse de la snerte qne 
toco é Venècia y à Carta^o ^ no obstante sa 
posicion insular. Auntjuc no se balla uiiida al 
eontinente , ella no puede existir sin hacer cir- 
cular los productos de so comercio y de sa 
indústria por toda la Europa ^ y por esta ne- 
cesidad , que fornia la basc de sa imperi o vicne 
à ser en cierto modo continental* Cierrese la 
entrada de todos los pucrtos Europeos é los 
Buques Briténicos ; tomcnsc , en el mar , todas 
sus mercadurias ^ y blot^ueesc y acorralese lí ese 
gobieruo atroz en su isla , por medio de la paz 
continental j y ved aqui los primeros medios 
seguros de abat trio. * 

Hay otro medio, todavia, mas eficaz y de- 

* Este grande emncno de 4a política, y de la filantro- 
pia, en favor de todos los pueblos del roundo , ostaba re- 
servado , para «u execucion , al Heroe que niandaba à la 
Francia. Los celebres decretos de Berlín y de Mifan con 
que ha pueito un freno à las ordenau^as bàrbara» del 
gobieroo Britànico, han fido el primer paso para esta 
grande obra que debe colmar, en luuy corto tiempo> los 
▼Otos j las dulces y consolantes esperanzas de todas las 
nacioiies. 

La lii>6rtad de las mares serà restablecida desde el mo- 
meuto |cn que se desplome el infame ^obicrMO Inglés ... 
Su existència es el mayor crimea que amancilla à la ticr- 
ra, y cubre de làgrimas , de sangre y asolacion à todo el 
géo^ero humano 

; PerezcOf pues^ tl Gobierno Britànico í 

£1 Traductor. 



119 

€i8ÍT0s este se elfra en los pandes proycctos 
de la Francla^ yea el valor incontrastable de 
sos exercí tos* El poder marhlmo exclasivo es» 
tà denancíado al Hlundo, como el oprobriu y 

Íla ealamidad mas funesta de todos los puc* 
los: -la Europa lo ba eondenadoj y la Fran* 
eia lo precipitaré en la ruïna , por graiides que 
sean sua fuerzas, y por mas vastas y artificio- 
aaa que sean las combinacioues de su sistema. 

CAPITULO 12. 

Diferentes sisletnas àèl pqdér maritiino 

exclusiva» 

Estos sistemas ban debido variar, segunlos 
siglos y las circunstancias. Los antig^nos no se 
asemejan en cosa alg^una à los modernos , por lo 

Ïe respeta à la naveg^acion. La bru j nia no babia 
ierto aun el mundo, y becbo comunicables las 
diferentes naciones y en toda la extension del glo- 
bo» Los modernos se parecen & los aiitiguos, en 
todo lo qne es relalivo é la ambicion del comercio 
y de las colonins , al org^uUo de la domiua- 
cion, y à la insolència de los arbitrios y doenos 
del mar. 

Observese atentamente: el gobierno Britani- 
co ba Uegado i sobrepnjar à los antignos y mo- 
dernos, en politica y en comercio, en orgullo 
y en avarícia. No ba cesado de aumentar la 
tirania maritima , con todo lo qne podian comú- 
nicarle mas profondidad y extension las venta- 



jas rccicntcs «Ic la brnjnia , y Ac la pólvora; íc 
la pcrfcceioii de laiarics^ y eonstrnccíoiies «a- 
ralos; del atrcviinicntf» dc:iodado i•ii la navega- 
cíon ; de la inujisídad de usurpoeloiics y djspo- 
jos opnlcnto» en los paisej» distatitcs 5 de la es- 
rlavitiid y inonopollo deslnietor eii la America, 
y en cl Oríenle ; dt» la aciiihitiaeion hmiensa de 
r!r[nezas; del msquíavclismo poHlico ^ llevado à 
gu mas alto ptinto en la snmbría imagínàeíon de 
los ealeiiiadores y ministres Dritanicos,* de la 
i{rhoraneia, corrupeion, y letar^ro de l2^Euro|ia;de 
la division y discòrdia entre las poteneias comercian- 
tes; de la avarícia mercantil, tan perfeccionada en 
sus teorías como en sn practica; y de la venatidad 
con (jue lia sabído paner en inovimiento a to- 
dos los vicÍQ» de las nncioncs , » todos tos cri- - 
menes de la política, y a todas las intrigpas de los 
gal)i netes. 

El sistema de Tiro fae solamente colonial, v de 
comercio. El de Atenas tuvo porobjetola {«-ioria. 
C^rta{|^osolo penso en extender por todas partes sa 
comercio 9 y en impedir que los Romanos se la- 
vasen las manos en los marea de Sicilià, como 
decia el negociador Hannon. 

El sistema de los Romanos fue todo gpnerrero. 
Gontinnamcnte àrmados, v conquistadores sobre 
la tierra, cllos acopiaron las riqnezas del mar; 
però ae dedicaron solamente a dilatar la esfera 
de I08 placeres y del Injo, con su sistema naval. 

Venècia 8Í{^aió el sistema maritimo de las na- 
cionesjíndustriosas. Dcsdc cl cieno de ans lagii- 
nas^ ToMó iu vista al Asta. Comerciar, naveg^ar, 



' 121 

T adquirir y acopiar Sniii<*iisas riqnczas; llcnarae 
del triste or|{['uHo que cila.s iiigp'.rsín: y venir a ser 
la (iresal miserable de la anstocracia; ved aqui 
toda 8u historia. 

La Espana uo estaklcctó sobre el mar sí no 
un sistema iniütar, para defend^r sus colonias; 
y un pasmoso Itixo iiNYl•l (|ne se disipó, coino 
cl bumo, en presencia de los Britaníeos. 

Lois i 4 creo un sistema vano de poder so- 
bre^ los marcs, para dominar un instante, y ho- 
miilarse para siempre en la Jlo^a. 

Amsterdam 8Í(j^uio el plan propio de las na- 
ciones comerciantes. El Batúvo laborioso uo pen- 
«ó mas que eu córrer en pos de la fortuna : { Di- 
cboso 9 si no se bubicra jamas desviado de estc 
sistema ! però , ei se dexó seducir por la In- 
g^laterra^ quiso coudescender con las intrigas y las 
maldades de aqnel gobierno ambicioso , y per- 
turbador del mnitdo : no atendié a la razon , ni à 
■u verdadero ioleres j y dexó de existir. 

El çobierno firitúiiico- ba reunido todos los 
sistemas , y labrado, sobre ellos , el que cons- 
fautcmentc si^^ue: esto es; un sistema general 
y exclusivo, de comercio y de indtistria ; un sis- 
tema de colonizncion exclusiva y univcifeal^ un 
sistema de conquista, por medio del bau)bre , 
las coDJuracionCs , el ^comercio de contt'nbando 
y^de monopolio, y las violencias y pirateria de 
su marina, un sistema militar de lierra, por 
niedio de las poteiicias coiittnentales que sedu- 
ce , y toma ^ mi sucido • y de mar , poi* el 
terror de sus numerosas escuadras^ un sistema 



18S 

pacificador, por mam apariencyi dcshinibndoni 
qoc cooscnra siempre co so scno. el foego de 
Ja discòrdia, ▼ por ao política pèrfida j aa in* 
tervcDcion poderosa en todas las gnerraa 9 j en 
todoo loo tratados^nn aiatema de enervacion j 
roina de k Europa , y de abatimiento de las po- 
tenciaa mas considerables; nn tistenur de invasion 
atrevida desde el Norte basta el medio*dia de 
la Europa; nn sistema , en fin, de naTCgacion 
hostil y ann en medio de la paz. 

De todos estos sistemas reanidos , se ba for« 
mado la tirania mas yasta , y mas imsoportable , 
coal no ha exercido jainas nlng^ou dèspota , nin- 
gun pobierno, y ning^on rcy, priíicipe, ó em- 
perador del Slando: tirania horrorosa, qne pe* 
sa, é nn tiempo, sobre todas las nacionea, y 
sobre los diferentes paises del Universo. 

Recorrcd la historia, antigua y moderna; y 
Tcreis qne el poder maritimo exclosivo ha si- 
do siempre mas Tunesto i las naciones , qne los 
conquistadores mas impetnosoa , bàrbaros , y fero* 
ces. Vereis qne este poder , siendo insular , ba 
sobrepojado, en calamidades generales y par- 
ticulares, i los fenomcnos mas destructores y 
espantosos que han desolado la tierra. 

CAPITULO 13. 

JEsie poder es mas funesta à todos los puebloSy 
que los conquistadores mas terribles» 

m 

Los malos examplos ban corrompido almniK 



--W^f 'V ' 



, *25 

do: y ei poder tnarítlmo ha sido èl fnayor éúf^ 
raptor de la espècie humana. 

Sea qae la natnralcsa haya qnerido castigar 
à los gobieni09 y à lo§ hotnbres, qne Iiao osa- 
do rompcr y traspasar las barreras formidables 
del Oceano ; ó sea que las pasíones de la co» 
dicia^ de la ambicioii y de las conquistas, se 
preseaten eomo los primeros frnlos de la nave- 
gpacion^* lo eierto es, que dei poder maritimo 
salieroii ^ en todos tíempos ^ las calamldades V 
los azotes mas terribles que han desolado al 
Cniverso^ y sus dcvasíaciones han sido mucho 
mas frecnentes y pavorosas | cuando eate Jioder 
haUeg^dòé ser exclosivo. 

Los conquistadores l9on como los metéoros des- 
tructores, que la naturalesa prodiice^ y liace pa- 
sar rapidameute. Alàs el poder maritimo redo* 
bla sus fucrzas con el tiempo ; tieue un siglo 
de conqulstas y de ençrandecimiento ; se le si- 
gne otro de orgullo y de tirania ; y si , por des- . 
gracta ^ no çe presenta uno de luces ^ y algtiaa 
naeion valerosa y eonstante^ el Unlverso queda 
sepultado en la esclavitud , y cu la barbàrie. 

ATos acordaraos , é pènas, de los males causa- 
dos por Alcitandro , Gengis>Kan , Aiila y Cai^* 
los 12.® Però las nacioues , que cxisten sobre 
el globo , conservan todavià las senales tristes 
de las cadenas , que las bízo arrastrar Tiro y^^ 
Atenas, Cartago, Venècia, y Londres. Los >. 
exércitos de los conquistadores , devoran y .son 
devorados , sobre el teatro mismo de su invasion 
però las escnadras de la potencia maritima^ Uevaa 



«1 insulto y la devastacion por todos lo& extre» 
inoè del globoj hacen circular las calamidades 
desde el auo al otro polo j y vuelven orgoUo- 
aaa à defendcr la tirania de sa metròpoli. 

Los soldados de un conquistador ambicioso 
aobrevivcn rara vez à la conquista ^ y deian 
en breve reposar al Jlfundo. despues de habcr* 
lo intimidado y opriniido; mas los des po jos de 
una potencia maritima sobreviven à au imperio 
Diallieclior, y eontinuan proporciona udo medios 
para la mas atroz tirania. 

Ast es , que despnes de la ruidosa caida de 
Càrtag^o y Roma, no se ka visto , sobre el mar, 
ai no piratas y salteadores. 

£stas calamidades se practican siempre con 
Bias furor , coando el pueblo ó ei g^obieruo que 
las manda , ó las executa , se balla circnuvala- 
do y protegido en una isla. 

CAPITULO 14. 

Xa majfor de las calamidades. 

Los estrag^os que produce la naturaleza , son 
momentaneos: però los que no ba cesado de 
producir el gobierno Britanico, son perpetu* 
os. 2 Gom^ ei^irpar la venalidad , la corrupcion, 
la servidumbre, fa traicion , y la calumnia <|ue 
ha introducido en las costumbres^ en la políti- 
ca y en la educacion misma, en los ciudadanoa, 
en los magistrados , en los escritos , en los go- 
biernos , y aon en las misnias leyes ! 

Un terremoto no produce si no calamidades 
localas : però , cnando el gobierno BrítAnico ba; 



12» 

€€ tirar nn canonazo^ sobre el mar , ans eeod 

ÍmvorosoB retuinban sobre los cuatro angulos de 
a Tierra ^ y si moinento comienzan el ineea* 
dio y la devastacioii en la America; las inya- 
siones furibundas en la índia ^* y la bacba ter- 
rible de la disco/dia inflama , en la Europa, las 
gucrras ctviles y extraugeras que la dèbil itan y 
destrozan. 

Las iiiuudacioncs mas eopiosas y temibles so- 
lo perjudican à las propiedades que se hallan à 
la influencia , ó a la inmediacion del canal natu- 
ral de las ao^uas. Los rios mas hincbados, aunr 
cuando se elevan sobre sus riberas , no devastaii 
jamas todas las Uanuras.* ellos dejaa ilesos, y 
verdeando a lo lejos , paiscs fértiles, y campos 
cnilivados. Però j Qne diferencia ! £1 i^obierno 
Britauico cubrè sin cèsar al globo entero , cou 
aus mercadürías , y sus odiosas usurpaciones; eoii 
sus Factorías , su estanco general , y sus injustí- 
cias ver|ronzosas ; con sus flof as , y sus crimenesj 
y no deja ver , mas alia de estos monumentos so- 
hei'bios de la tb'anía , si no reynos snmergidos , 
en la misèria ; naciones oprimidas 6 esclavizadasj 
y el comercio universal encadenado é las ruedas 
reciíinautcs de su formidable carro. 

8i la naturaleza enciende, de tiempo en tiempo, 
à los volcanes sobre la costa de algunes mares, 
sus lavaH inflamadas no amenazan si no i las ha- 
bilacioncs vecinas, que se ballan aljpie de su ful- 
miuante cràter: mas el {^obieruo Briténico , so- 
plando , por todas partes, la voraz liorrtble bo- 
gucra de la gnerra, por todas par tes, enciende 



y 



IIM 

y bace rcventar , con paroroeo cstampido , IO0 
Yoicanca de la política^ mil veces mas temibles 

Ífanestoa é la infcliz humantdad) qae los del 
^esavto y y del Etna. Con la misma mano con 
que lleva el incendio à Itàlia^ Alemania, Ho- 
landa , Espàna , y Francia , lo prende en el 
filéxico ^ y en cl arcliipielago Americano* Las 
islas del Mar del Sur no e8ca|)an A su hacha 
funeral, y sufren tauto coino las costas vecinas 
del JUar del Alorte* Cnbre a todo el Oceano 
con sus naves destrneCoras, y bloquea a todos 
los pnertos con embarcaciones incendiarias» 

Los volcancs« en el curso del ticmpo, fertili- 
zan con su9 mismas Uvas , los campos qae ba* 
blan agotado y dcslruido : però el g^obierno 
Briténico volcanisa sobre toda la Taz de la'ticr* 
ra por sus guerras , y sus maldades J por sn 
marina ^ y ftu ambicion frenètica , sin mas ob* 
jeib que el de avasallar à las iiacioncs cons- 
teruadas y abatidas , ó el de quedar solo con 
todo cl poder , y toda la prusperidad drl niun* 
do en nicdio de tautos puebios opriïnidos , ó 
auoiiadados. Tales son las consecuencias del po- 
der maríiimo , insular. 

CAPITULO la. 

De las Nactones deslntcloras• 

Por felicldad de la espècie liumana, no se ba 

* visto sobre la iierra si no [un número cortisimo 

de uaciones destructoras» Las ban producido el 



127 

Norte T el Ocaso de dnrenios continentea» 

Los VisigodoB y loft Vandaloa modaron la 
faz de la Europa. 

Loa Tàrtaroa del Aaia ban envadido y de* 
▼astado mnehas veces é la China. 

Los Britanos devastaii) \i ya para an aiglo^ 
a todos los palses couocidos. 

Los prlmeros^ incitados por sos costuinbrea 
feroces ^ cayeron comò aoa iiiuodaelon de barba- 
ros sobre el niedío-dia de la Europa. 

Los segundos ^ obügados por la escasez > y la 
rudeza misina del clima qne habitaban ^ corrieroa 
en busca de los paises favorecidos por el soL . 

Los terceros , irritados por la ambicion del po* 
der y y por la codicia del comercio , ban cubierto 
los mares de violentas piraterias , los contincn- 
tes de csclavos , y los cabos princípalea de sua 
odiosas fortificacíones. 

Los Visigodos 110 hlcíeron mas que alravesar 
la Europa; y los Tàrtares se incorporaron con 
los Ycncídos: però los Ilritanns se establecen por 
todas paries como conquistadores, títcu como 
despotas , y se inautieoen à fuerza de opresion y 
tirania: por todas partci los ensambres de este 

!)Ufíblo iusolcnie y devoiador se cspareen, y se 
ixan para extraer y consumir la substància de to- 
das las naciones del globo , y para oo pcrmltlr la 
vida y la abundància si no ii la que existe en una 
ísifi Jc la Euro|)a. 

Lot Visigodos aïra veaaban los grandes ríos del 
Norte , |)ara destruir y devastar. 
Los Tàrtaros mudabau el curso de los ríos , y 



I«8 

los íVirigüm à sa TolaBtad , pam exterminar à las 
iiacíojies , 6 invadirlas con menoa trahajo* 

Los Britaaos bau heclio mas qne todo estos cllos 
lian sojusgado y cncadenado à au arbitrio las ólas 
del luar , para Ubrar exclusÍYamente , en sn lai^a 
extcnsion , los opalentos surcus que él prescuta; 
y para rccoger , por su medio , todas las produc- 
ciones d;» los cotitinentcs. 

Los Vísigpodod han desa|iarecido ^y los Tarta* 
ros ya no domínan—.. ^ Serà posíble , pues, 
que exisian por mas tiempo los gobcmautcs l$rí- 
tiníeos en la combre de sa monstruosa lli-a- 
nia? Digamos algo mas: los Tartaros y Visi* 
g^dos bacían ona guerra atroz à los puebios 
esclavizados; estc era el producto de una es- 
pècie de íiistinlo natural y dominante en los 
puebios barbaros.... Los /Britanos hacen ukcí 
guerra continua de exlemünacion ^ a los pnebloa 
libres ^ y esta condocta es dictada por la deiibc- 

* « La Pòster idaü le estremrcera deliorror, cuam^o lea 
« en la historia, que un micmbro del gobierno Britàníco, al 
« fi» del siglo 18° , tuvo la osadia de voUr LA GUFJIRA 
« DE EXTERMlNACIOüi « * CONTRA EL PüEBLO 
« FfiANCES. " 

Eslc voto bnrbaro cocstaen el niensage del Dircctorio cjc- 
cutivo, pasaclo alcouiejo de lus Ouinieutos, ^ leido en la Se- 
sion del 8° de IVítoso , aao 6.** 

* * Sépalo cl muudo: Pítt ha sido cl Lombie encu« 
jros labios resonò este voto Uàrbaro. Monstnto, tni nudda- 
des nutrició y fiiKÍlíarUado cou los mioieues maü banro- 



n 



129 

rftclon cfticaladòra y fna de un gobierno muclio 
mas feroz que ios Visigodos y Tértaros. 



rosos: Tu, que no encontrabas deleyte sí no en medio 
de la sangre y de los cadaberes : Tu , Cuyo nT)Tnbre hard 
precisamente retemblar de liorror i. las generaciones venU 
deras: verdugo , y tigre feroz y destructor del genero hu- 
mano: {Puedan rcca^r sobre tu cabezayla de tus infa- 
mes secuaces, los males espantosos de la GUERBA DE 
EXTERMINA CION que has votado eontra los France- 
ses!.... Però; la tierra està líbrc ya de este monstruo:él 
acabo de la misma suerte ((ue habia rivido: eansado tal 
vez de *eometer crimenes y atrocidades contra la espècie 
humana , executo la última en su misma persona : ví<ò qui- 
80 sobrevirif i las gloridt de la Frantía|nii la confusion 

del sistema horroroso con que dirigia al pueblo ingles : se 
ènvenenó; y su muerte hubiera sido un aeontecímiento fe^ 
liz por el gc^nerp humano, si no hubiese dexado en los 
Castlereagb, en los Sidmonth, en los Eathurst y en Íos 
LÍFCrpool hcrederos dcsaforados, y sectàries obstinados de 
fuf destructores y sangrientas màsimas. 

^ El Traductor. 



9 



130 

CAPITULO le. 

JDe la mflueneia qus proporciona la situaclún, 
insutai' f.ar^ los excesos del podet mari^ima 

excH*sÍM0é 

Est6 i^pitulo paedíe derrír de Inz para des* 
cobrir como el g^obiemo Britànteo ba sobre-* 
pujado en amblcion, en orgullo, eucraeldad^ 
en codiciay j en tirania i todaa las potencias 
marltimas que y sucesivamente , ban uaurpado el 
çetro del mar , en la sèrie de tfes mil anoa* 

La sitoacion insular proporciona , por sn na-* 
toraleza, los mas ràpidos y mas funestos progre80$ 
al poder maritimo exclusivo. Si fuera eontinental^i 
podria ser algnnas ircces injusto : però siendo in» 
salari no puede menos de ser culpable siem« 
pre I opresor » tirano , 4 incompatible con la paz; 
y la feliciflsid de las otras naeiones. Gomo con- 
tinentaly la ambicion podria ser sn defeçto: y 
cpmo insular f no puede eústir sin latrocinios^ 
nsurpaciones , y TÍolencias continuas* 

De la sitnacion insular nace la neccsidad de 
la navegacioni y cl espirita de la pirateria» 
SUa no tarda en inspirar al gobierno p la am- 
bicion de las conquistas^ y de la dominàcion uni- 
versal; y en proponerle^ como bases de ^a 
politica , las mas emponzonadas intrigas | la cap* 
ciosidad I la traicion, y la fuerza* 

Ella presta i este mismo gobierno los ins<* 
trumentos mas actiros de conquista , y de do-r 




ff^9 t pKsentarée con sn orguIloM y aterri* 
dora knarina en todas partes. Le proTee de mb' 
dios poderosiM» para Bosteneí^ an drgnUo; dila- 
tar la esfera de sú ambicion; f sacndír ioipn^^ 
nemente el azote fnlminante de la tirania , con 
jel prodacto inmenso de an comercio > J de sos 
pstentoeaa riqnezaa• ^ 

El eatado insidar paecie , tambíen ^ existir ba* 
xo nna eonstitneion mas imperfecta qae lad de 
loa puéblos eontinentaleas y este es ono de los 
motivos qaeleinqnietan y lesobresaltan, çnando yé 
mejorarlaa consttiaciones poUticas en cnalqoiem 
de los eontinentes» Gste g^obiemÍD» ifaiere tener fi 
jtodoel g;lobo anmergido en ' las tinieblas ^ en la 
esclavitud y y en la misèria , pòrqoe és el mo^, 
do de dominar sobre todos los pneblós, & dà 
bacerlps dependientes de *8n poder ^ # sn for-* 
tana« Asi^ él póne sn mayor empelio en so-» 
focar I por todas partes , el germen de la inw 
dnstria^ de las artes, y de las cieéeias^y en 
impedir que el bombre pneda - lerantar jamis 
sn Tista à la Hbertad y dereetios preciosos qiiQ 
le dispenso la naturaleza. Si algnna ves pare- 
ce eontemporizar^ 4 favorecer i este 6 àqad 
pneblo, en las eminresaa lison jeras de méjorar 
sn snerte, <Qs solo çnando conyiene k los cal* 
cnlos de sn poUtica artificiosa;' enandosétrata 
de disminuir el poder y las fnérzas de alga* 
na nacion que irrita sns zelos; 6 çnando, a[ 
favor de estàs mismaa empresas, pnede estable^ 
cer nuevos canales i sn nespotismo y mohopoj[ 
lio mercantil* i . ' 

1 



152 

El fstado insniar liace al pncblo naiuralmeD- 
ie ejroista; vod aqui otro efecto propío de sa 
posieion aislada* £1 mira con iodifterencia y con 
inenosprecío i los pueblos del coulínente J y se 
[j^oza altancro ^ cuando los \é oprimí dos y des- 
trozados baxo el peso de las calamidades. Con- 
tribuye à prolon^j^arlas , ó las bace nacer, con de- 
pravado manejo ^ para reportar las venta Jas que 
le proporcionan estàs mismas crises. £n una 
palabra: el goblerno insular desea dar la ley 
a todo el muildo ; y para conseguírio ^ quisie- 
ra que todo rl no estuvíese pobtado mas que 
pe bordas de esctavos embrutecidos y miserables. 

Las babítados contraidas sobre el mar, y cl 
exercicio continuo del comercio destrnyen los 
sentimientos mas nobles del coraxon liumano, 
y producen la cobardia en los combatés* Ve- 
reis slempre à los insulares buir^ volver^ y 
no peicar jamas, sj no cuando tienen una su- 
perioridad decidida y enorme por su numero y 
por su posieion. Esta cobardia. se muda con 
el tiempo eu crneldad| y en barbàrie. 

£1 estado iosulai* inspira un temor natural à 
los pueblos que comprehende en su recintoi- 
ellos no puedén escapar al encmi^o poderoso 
qqe llegnc à cacr sobre su isla,* y cste pen- 
samienio los tiene de continuo en Ja mayor 
inquietud y sobresalto. Tal es .el motivo por 
que cl gobierno del pais insular constantemen- 
te sopla el fueg;o de la guerra sobre el con- 
t^ientc, à fin de que las naciones se cntreteu- 
gan y se déstrocen^ y le olviden* 



iS3 
Este çobSerno , indacidó por sii situacion , for- 
ma 6Íeinj)re bus ^fraodes proyecloa para exten- 
der el vuelo de su ambícioii ardíente a los cU* 
Diaé reinotos; aeparando de la vbta del conti- 
neiite los cstableennienlod f|ue liace, ó las ia- 
vasiones que medita* El gusta maa de usurpar 
en el Àsia que en Europa. ÍÜaria mayorcs en- 
fuerzos y mayores castos para eusenorearse de 
la isla de Ceilan, que para obtener la de Cor- 
eegpa, aun cuando esta fuese tan opulenta coino 
la otra« Se lisonjea mas de tramar una consplfa- 
cíon en la America del Sur , que de org^auizarla 
en el Oeste de la Francia. 

Como la situacion insular bace i un pneblo 
Tccíno de todos'Ios otros, por medio «de sa 
comunicació^ naval, el gobierno se a^urovecba 
de esta venta ja para llevar y difuudir , por to- 
dos los puntos del g^Iobo , las llamas destrnc- 
toras 4!e la guerra ; el luxo de su indústria ; el 
mouopolio exclusivo de su comercio; la cor- 
rupcion lisonjera de su opulència; y la domi- 
naciou orgullosa de su marina. Él pueblu de 
su isla le proporciona copioso número de bom- 
bres de mar ; le abre puertos en todas las cos- 
tas a sus flotas , y un abrigo fàcil é sus buquos 
mereantes; y el gobierno se prevalc de estàs 
circonstancias 9 para construir estableelmieiitos 
militares y terribles de un lado a otro; y para 
coloèizar en todos los clbnas, y robar en todos 
los continentes. El pueblo se considera como 
navegante; y el gobierao como propietario y sc- 
SHMT abtKiluto del mar. El pueblo no medita m 



àio solive kií trento ja0 del ^memo; y el ço^ 
hietíÈú solamente eobre las del poder, y lado^ 
mliiacioiïs sienípre ambicíoso^ por qne tiene liíuV 
iitad de baques y eseuadrasj siempre orgallo- 
|3| por qae confia en sns riquiezas y au Bàs briUan- 
tes faerzas: y siempre dèspota, por qne el mar le 
sinre de bàluarte. Asi es icomo el gobierno insular, 
fno coniento de éxercer el poder maritimo , abu- 
'sa de él con horrible éxcesos : no solamente 
es exclusivo, si na que erige un sistema de la mas 
espantosa y tremenda tirania* 
f JBI posee,. a la verdad, mas recursos, y mas 
(Fortuna y poder maritimo que loè estados del con« 
Hinente: però tambien esté obllgado à combatir con 
ienemig^os mas formidables j y expuestd à sufrír 
^Icisitudes mas funestàs. 

Todo el genero humàno tiene un interès comun 
en derribar à eéte coloso de tirania y criménes j 
V ma»tarde ó mas temprano , debe estidiar , sobre 
«u cabeza delincuente, el rayo terrible de U 
.Veàganza general. 

CAPITULO 17. 

filna naeian grande puede emj^eoji $U9 fuertàk 
en deftma del poibr nuírüimo coiaun• 

Se necesità de una nacion justa y YÍdforiosa, 
que pueda estipular por el bien de là Bepubli- 
ta general del mundo. Esta nacion es la que puc* 
de reducir , 6 castigar los excesos del poder ma- 
Vitímo exduaÍTO» £llà encontrara los moliVos ~^^ 



ftSS 

tilàusiibles ^ en la neceiicUd mtmk , de restablecer 
oB derechoft comuttea de todos loa poebloss sq po* 
der se incrementa > y se baee respetar por h jiuh 
ticia de la causa general que defiende : 6ii misioii 
le està conferida y autorizada por la TÍctoria ; y sa 
dèrecho es el que dicta imperiosaménte la ne- 
cesídad. 

Qnando liUis 14** armí sus escuadras^para 
contener i las potencías Berberescas^ se aplandió 
en toda Europa su conducta } mas ^ cuando cnbrié 
los mares con fulmlnantes y altaneros buqnes^ 
deslumbrado por la ambicion de la monarquia u* 
niversal, excito los seloa y la eiecracion del 
mundo entcro. £1 atentaba , en este ultimo oaso^ 
contra los dcrecbos sag^ados del poder maritimo 
'comun ; y no parecia respetar sinó los intereses 
particuiares de su o^oUo y de su glòria. 

Quaüdo los Romanes ataearon Ala soberbia de 
Gartago, trabajaron^ al pareeer,^ en favor del 
poder maritimo comun 5 por que no dirígieron 
contra ella sus érmas formidables y vengadcvas^ 
si no como contra unaViotencia comerciante, exclu** 
fiiva, y usurpadora de la libcrtad de los mares. Cier- 
tamcnte no mediabau entre Roma y Gartagolos c^ 
los del comercio , ni los de la navegacion. Roma 
no creia que pudie^e Iiaber otro imperio digno de 
su ambicion mas que el de la tierrat todo aleja- 
ba su vista del comercio* 

Mas ^ en verdad , cuando )os Romaflos destru- 
yeron à Càrtago ^ afcctando no tencr mas interès 
que el de su ruina, y simulando el carücter te- 
mible de tïonquistadores con elpreteito del bion 



156 

general, engaSaron al noiTeno, y no tardaren 
eu qultarse íà mdscara. 

Los Franceses combaten contra el gobierno 
Britàníco , para destruir el poder marílimo exeluf 
sívo; y consecuentcmeute estipulau por el comtio, 
y por la felicldad g-cneral de todas las nacioncs. 

Ki no fuera su objeto unícamente el de dcfen<« 
der la libertad de la Europa ; abolir la esclavitud 
de los marcs , y restablecer todos los Estados eu 
el gocc leg'itirao del poder maritimo comun ,* ellos 
eng^anariau tarobien al universos però, las ma- 
xiinas de su política , y las bases constituciouales 
de su gobieruo , dcbcn asegurar sobre este pun- 
to la Europa I y el inundo entero. 

EI eng^randecimiento de Roma fué obra de sa 
libertad , de sus virtudes , de su política , y de 
8U sistema militar. La de Francia no solo esta 
fundada sobre estàs bases con una superioridad 
incomparable en la perfeccion de cada una de e- 
Has j si Bio tambien sobre los cimientos iudefec- 
tibles y grandiosos de una poblacion in* 
mensa , y de las copiosas riquezas de su nus* 
mo suelo» 

Roma baeia alarde de sn poder y su grande- 
za, para aumentarla de mas y mas; y para imponer 
el yngo esclavizador k toda la tierra: però, la 
Francia no se sirve de su alto poderio , ni de sus 
admirables victorias si no para asegurar la paz 
del continenente , y la libertad y prosperidad na- 
tural de todos los pueblos. 

Si Roma formó nna marina para proveer al lu- 
jo 9 y al esplendor de su Capital , que tomaba el 



137 

titulo insolentc de Senora del mnndo ! la Fran- 
cia hace trabajar y con pasmosa actívíaad , en to* 
dos sus arsenaies , y crea ena marina formidable , 
eolamente , con el objeto de rcstablccer los dere- 
ckos de ias nacíones. Ella desea la paz de la 
Europa , y emplea sus poderosos esfncrzos para 
conseg^nirla , ü nn de aomentar el comercio de ca- 
da nno de los pueblos , y asentar, de un modo fir- 
me , la tran<iuilidad comun de todo el Universo» 

En la primera g^uerra Púnica , el tirano de loa 
mares, conservo su tirania. Las dos poicncias o- 
prcsoras del mundo se reparilerou, eutonccs , là 
ticrra y el mar. Boma, continuo mandando 
sobre la ticrra j y Càrtago ^ se reservo el Inij;c- 
río maritimo. 

j Oprobrlo elemo i los Romanos que subs- 
cribieron à semejante tratado ! La Francia no 
eometerà janias un herror tan vergonzoso^ y 
tan luuesto. 

La segunda guerra Púnica hubiera precipita^ 
do la caida de Roma y obiigandola, con tardío 
arrepentlmleuto , à conocer su error , si las de- 
lícias de Capua no bublesen debilitado las fucrzas 
de Anibal ; ó si los partidos y facciones , en cl 
Senado Cartagines, no hubiesea paralizado el 
curso i sus niaravillosos trlunfos. La Franciu 
esta libre de estos viciós y contrastes. 

Se necesitó de toda la firmeza de Caton, y del 
proyecto aun mas firme y valeroso de Scipion , 
para lavar la mancha adquirida eu las dos prlme- 
ras gueiTas Punicas. 

Calon cooclnia aiempre sus discursos eu el Se* 



€50 

bado ï cou éntíB palabiM . ^^ Dertruyase é Cirtà* 
go« " Seipioo oizo mas : él Ueyó la merra à 1a 
Àfrica j eayó eobre las miirallas de Cirtago^y 
cste coloao altanero de la iprandeza mercantil 
desapareció de la lax de la tierra ^ i qulen habia 
ojvimldQ por turgo tiempo* 

Tres guerras Fanicas fueron necesarias para 
vèncer y dcslruir 4 C<4rtagox inenos serà preciso 
para someter y derribar al gobierno Britanico» 
£xaniinad las foerzas fisicas y permanentes de la 
Franciaj la solides de so ststeiha ; los progrcsos 
asombrosos de sos àrmas ; y la acütad en qaé 
te baUa toda la Europa; y Tcreis à los déspotas 
de Londres agonizando yà, y tocando la orilk 
del eepolcro* 

(CAPITULO Í8; 

* ■• • 

pe tos fífinuMúS y de hs Franceses. 

* ■ 

Roma oprimia con sns Irmas formidables al 
inundo j y Cartago lo oprimia con sus naved 
altaneras. Roma y Cértago locbaron cucrpo ú 
cuerpO| como lo hacen ahora laFrancIa y la 
Inglatcrra ; però aqucllas dos potencias antiguas 
y rivales ^ mrecían el espectacalo de dos rabio- 
sos despoias que se dísputaban cl uno al otrò 
sus csclavos ; y la Francia y la Inglatcrra pre- 
sentan el espectacnlo consolador de la llbertad 
continental, armada de rayos, para destruir 4 
la tirania marítima. 

^^ La Victoria sola, àice Montesqaieu ^ fué la 



f ^ mié àeddié » ei ddkia deciree — fe Púnica 6 fi 
'^ JRomatuí/' Bf as ^ aun cuando no fuese iufaii^ 
ble el resaltado de las empresas y esfaerzos com* 
binados ^ en la Europa entera , contra los tiranoé 
del mar^ se diria ^ y se dirà en todos tiempos — là 
féy la tirania Jtrilaniea : asi couio la posterídad^ 
kdmirando la g^randeza de là Francla ^ y los pro* 
yèctos benéficos y sublimes que ella Im concebidd 
para el bien general del Slundo j dirà siempre«^ 
il valor y el patriotísmo Finances» 

liOS Romanos aspiraban con ansia à la supé* 
rioridàd y soberania universal , para oprimir à las 
naciones , y los Franceses se ban elevado al pri- 
mer rango del poder çn la Tierra , para libertar a 
todos los puebfos^ y defender sus respectÍTOS de* 
krechos. 

liOs Romanès no atraVcsaron el Oceano 9 si n6 
para conquistar i los Britanos ; y la Francia nd 
bari caer isus fuerzas respetabics sobre aquella 
isla j si no para castigar al gobicrno hitot que In 
domina , y que se ba hedio cl escandalo de toda 
la tierra. Si ta Francia , victoriosa yà de la In« 
{^laterra , intentase por desgracia ocupar su pues- 
to; y consUtúirse , como èlla^ una potencia ma- 
ritima , etclnsiva , y tirànica j abriría el paso A sn 
Yuina , y merccería, icon razon, ser cl objçto del 
escandalo, y là execraclon general del mundo* 
Però todo uos prueba , que ella esta muy distanté 
de conccbir tan funestas ideasj y que sus princi- 
pies- se fandan en los de la justícia y el bien uni^ 
vei*sar. 



140 

CAPITULO 1». 

De algunoa tratados ditfnos de admtracwn y de loor» 

El prímero qae se presenta à mi memòria , es 
el que concluyó el cèlebre Gelóu ^ cuando triun- 
fó de Cértago. Estc prliieipe no exi{j;ió , por fru- 
lo de sus tietorias, si no que se aboHeseii, en 
iiàrtag^o , los sacrificios buinauos. Estipulo enton- 
ees por la causa gpcneral de la huinauidad ^ y por el 
bien mismo de la poleucia ((uc acababa de vèncer. 

El se(j^undoy pertcnccc al rejnado de Luis 14; 
él pnso fin à las calamidades y honores de la pi- 
rateria , destruyeudo los medios y recursos mal- 
liechores de que se servian las potencias Bcrbe- 
rcscas para ejcrcerla. 

£1 tercero, y el mas Importante queda aua 
j)or hacer : estc es el qiic , despues de anonada- 
das las usnrpaciones de Inglaterra y derrocado 
el gpobierno infame que los practica , proclamarà, 
con un gozo universal , la libcrtad de los mares, 
y la del comercio en favor de tudas las naciones. 
Al poder de la Francia esta reseivado este ho* 
nor: y ella estipularé por el bien del univcrso 
entero , cuando lleí^^ire i exterminar y coiifundir 
la tirania mercantil , y los crimenes detestables 
de la sombría y feroz Albion. 

k:apitllo 20. 

De hs cuatro úllimos siglos. 
lia audàcia caracteriza al bíçIo 18^ , por lo que 



141 

respectà & la naTegacion. EI comefciò, enton- 
ces , era nulo ,' y la política birbara. El mar e»- 
taba librc a todo», do por derccbo reconocido, ni 
no por ifj^norancia , y por indiferència cornuo. 
La política y la i^utírra no liabian establecido, 
auo sobre este eletncuto , ua domioio particalar 
y exclusivo. 

El siglo 16^ se distingtie por descobrimíentos 
asombrosos y útiles, y por crimenes Iiorrendoe 
de aigpiinas naciones. La America descubierta 
por Colon , bonra é este g^enio emprendedor ; pe- 
rò ensangrentada y robada por la Espana ^ cubre 
de oprobrio a esta nacion ambiciosa. Fundose cl 
sistema colonial ; y las calamidadcs del genero 
bumano se aumentaron basta un extremo iiicon- 
ceplible desde esta època. Las reliquias de la 
armada invencible dcFclipe So^ inflamaron la am- 
bicion en las potcncias maritimas de Europa , en 
Ittgar de servi rias de escarmiento. No se aten- 
dta mas que al prestigio brillante de las grapdes 
riquezas y al orgullo de la domioacion y del poder. 

En el siglo i 7^ , la Europa navegante se atre- 
vló à mas , y tomo posesion real del univcrso* 
Aparento veriBcarlo, solamente, por el bien del 
comercio, y de la indústria s però lo hizo condu* 
cida por el estimulo de la ambicion ^ y por un cal- 
culo profundo de la politica mas artificiosa. Las 
naciones mercantil es y aventnreras «consiguieron 
ventajas j mas , las agricolas y sedentarias pcr- 
dieron mucbo en esta novedad terrible; y la iiu-. 
manidad gime, aun, baxo el peso de las calamida* 
des de que ella ha sido cai^a. Los Eoropcos in- 



14» 

radieron la ticnra »ol»re Io§ ponfo^ ma» 
nenetraron con intvepidez y org^uUo é todos lo» 
]taÍ8e8 ; y fomiaron estableeimicntoa à TÍTa ftaer- 
sa , practicando on comerçip injosto , logrero 5 y 
)nonopoIizador« 

Dividamos el ft%Iri Id.**, «ti dos periodos , el 
primero ré descollac y afirmarae el despotiamo 
maritímo de loa Britanoa* La desgraeiada bata* 
lla naTdl de la Uoga aseg^ró^ en sos manos, el ce* 
4ro d<» I08 niarem* £llo9 Lícleron desde laego caat 
Halo , para todas las naciones , el comercio, la 
marina > y la induatria• La gaerra de la suee- 
Hion de Kspana oontribnyó à fomentar la am- 
bicion Britànica ^ y en ventaja anya , debilito 
la Europa que no habia aprendido aun à cono* 
cer las jiiiras yerdaderad de la política de Ingla* 
terra. 

En el 9e{;ando periodo de eate siglo, aparece 
la independcDcia de los Eatados•Unidoa de Amè* 
ricaj la revolucion de Franeia, y sua (prandea 
empresaa para la líbertad de Europa j las vicisi* 
tudes de Holanda , de Itàlia , y de la Snisa^ 

8ie luchan con los prinçipios corruptores deia 
lig^arauia 9 y one aceleran la època de sn nue- 
Ya posicioni en la &z del M undo* Todo esto 
nbre nn borizonte maa Tasto al comercio de laa 
taaciones 5 y hace nacer las lucea mas resplan* 
decientes sokre los derechoa de los pneblos. 
Dislpose ^ como el hnmo , la infame coalision 
de Pilnitz > y «1 odio general se dirige contra 
^ gobiemo Britanico^ que la habia tramado. 
I^a opinion púbUci^ acVmvuidO| reclania la Ur 



)iertad ie loa marts y del comerdto; h desfraccion) 
4el sistema usurpador de la Inglaterra 9 y el cas- 
iíQO solemne de sa antig;aa y monstroosa tirania ^ 
fjae ba poesto en feodo 6 todo el nniverso* 

CAPITULO 21, 

jPaf ni0* fetufàlf 

Nosotros nos haÜamos en el sígio 19 sobra 
^ continente : pera en los mares domina aun 
el 6.^ A esta época^ extendian los birbaros del 
Norte sn regpmen feudal y opresiTO sobre la 
£uropa^ y los de las islas Brítiniças han en* 
bierto ^ y cnbren , basta abora y de opresion j 
servidumbre al unirerso entero. 

EI gobierno Britànico ba feudalitaio los ma« 
res : ellos existen sometídos por todas partes 
A sn soberanía naval; y le pgan por todas par* 
tes los censos y tributes impoestos. 

El comercio do^ todas las naciones esti en^ 
c^rgado, por los Britanos; con el derecbo de 
peag^e ; sns castillos flotanteS se «itablecen, para 
cobrarloy k la confluència de todos los rios^ de todos 
los poertot j estrechos, y cabos de la tierra éonocída r 
y obligpn à todos los Estades y Pueblos del 
continente k rendir fé y bomenage al {;obiemo 
de Londres» 

Los exércitos dé Enropa son^ ante la sobera^ 
lila feudal de Inglaterra^ dependientes y snbor- 
dinados i bandos tan imperiosos como los de 

los antignos sefiçies} Ifui cotonini de }í^ dos 



114 

Tndías MMi gos feodos: lus Wieje^ del Àsia mm 
Ta<iallofl siijMj j los de Earopt wiwokà soc»> 
tipendío. 

Gibraltar, desde qae ha sido robada pérGda- 
inente à los espanoles, es la plaza fnerte qne 
dotnína à los dos mares, j sírre de freoo al 
Àfrica : la Jamaica ; las antílUs de solaTcnto ro- 
bada» en la America, a los Franceses; y el 
Catiada; son como los lorreones qaeamenazan 
de contiBoo al arcbspielago americano, al Up. 
xico , y ^ las dos Goyanas : el Cabo de Bue- 
ifa-Edperanza es la torre desde donde lanza sos 
miradas codíciosas , sobre lodas las tierras del 
Malabar, y sobre la ancba exlension de los mares 
yecinos t Manila es aa pueslo ioieresante qne 
anbcla el avido Brltano para feudalizar cutc- 
ramente al Mar del Sur : las tslas de Bahams 
soo las caevas eo qoe maatiene hordas bam- 
brientas de plratas que laaaui , contlnuamcnte^ 
sobre los pucblos de la America , y de la Eu- 
ropa roisma , para devorar f u comercio : y cl 
fucrte Malden , sobre la frontera de los Estados- 
Uiiidos, es el sitio liorrible doade asalaria i los 
salvagcs , y les di^tribuye pólvora , fusites , pii- 
nales , y cachíllas dcstructoras , para qac sacrifi- 
quen 6 loa pacificos babitantes de aqucl pais. 

Terra- Nova le provce excluslvamcntc de los 
productos lítiles de la peica, y de multitud de ma- 
rines; Halifax abrig^a sns escuadras; y el Cana- 
dà le paga an rico tributo con sus pielcs, y le pre- 
para una poblacion ambiciosa qne se arrojarà un 
dia sobre los KaladusUnidos ; cuando la libcrtad 



14{I 

de 8119 paeUo9 Uegne ' i debilítarse , confom* 
perse , ó anglicanixMrse { si el gobiemo de 
aqucUos Estades no sale de sn letàrgica apatia, 
y no previene este golpe, arrojando à los Bri? 
taiios de todo el suelo que ocapaq en so ve* 
çindad* 

Los Reyes fendales. de la Enropa tenian nn 
ccnso territorial , comiin, y aniversal , i qae 
sonietlan las tierras y los hombres. £I gobier- 
no Britaníco lia inyentado , de igual manera , 
uA ccnso comiin y nnivcrial maritlmo: exige 
sii pag'o a las islas de especería , à las de aziir 
car , y a las colonias ricas en metalea , i fin de 
pQsccr à un ticmpo todos los signos y todas 
las niaterias del comercio. lla constittiido al man 
do todo bajo su poder naval , bajo su jarisdíccionT 
potUIca , y bajo sus ^xaccioncs fiscales. 

Este mlsmo gobicrno ba establecido, sobre I09 
mares , un dcrcciío de confiscacion general y ar- 
bitraria : çl yisila à todos los navegantes J se apo* 
dera , cnando le parece , de las embarcaciones de 
todos los paiscs, y las cpnfisc2| : aprisiona i los 
marincros.de }as otras naciones , sea en paz , ó en 
gncrra; y los obliga, por la fuerza, à servir en sus 
cscuadrad, muçhas veces contra so misma pàtria. 

En tiempo del feudalisme senorial de la Enro^ 
pa f cada Scnor tenia su torreon ; y cada torreon 
sus calabozos: mas, bajo el fe^dab•mo maritimo 
del gobicrno Britaníco, cada colònia tiené sus tov- 
reoncs y sus castillos ; cada navio se conyierte en 
na calabozo flotante, ycadacapitande navio çq 
un carcelero* ó en un verdugo. 

io 



146 

La» manífactoras de la Europa safiren el 
mo pesa de la «ervidunibre. Lod eanipos de Por- 
tugal Cétaa gravaJu» eoii el luas ciebpotico feada- 
littino de la íii(^iaterra* Lan poteiicias del Bal* 
tíeo la jMi^au ttibuUi de 6U íodiistria J y las otras^ 

* Lat eosat han Taríado, j lutcampot de Portoi^al 99 
halUn, ahc'ra, cubíertof ile Itopat líritaDÍcaf. £1 gabinete 
de Saii«Janif?f desterro la casa de Bragauza al Bra^ilJyen 
el misroo tíempoqii;* da la Icj , com Aeiior , en aquella co- 
lònia» rstablece en el sucio Fortugati on despoi.isniotirank-o 
V militar, hi Lord wcUiíigtou, el ngcnte desaforado dtl 
infame gobíerno Brit'jnico , ba asolado aqiu I bcrnioso país, 
j lo ba empap.id'»., con sangre bumaiia, j cubíertoron iiiini. 
mera bb'S cada ver et |>ortiigni*scs..•. baiod prer^ixto ostento- 
•O de dcfetiderlos, solo Lrata de destruzar y extermiuuilos. 

El gobierno i^ritànico pn-ree que su durainacioii , m cl 
continent^! , no puede durar por largo tiempo; y se apn»- 
▼ecba del corto iotenraio que Ic permiten las circunst:ui- 
cíaSf para arruïnar l*orti:^al, y Éspaiia; dexar sus tiei*- 
ras absolutamente dcvantadis; sus riqunEas consumidas: 
j fu pohlacion reducida à cero, si et posible: ved aquí 
el místerío abomiuable de su política bàrbara. 

B«tjo el plan combínado de e.^ta perfídia y atrocidad 
el gobierno Brítàuico se ba apoderado de las pocas fu- 
erzas navales que aun quedaban à la F.spaiia , y enseno- 
rcado d Ceuta , poniendole guaruicion i^ritanica. Hacettw 
do lo posible para adquiriria isla de Cuba y {9. de Puer^ 
to-'liico'i y p;ira que se le pi-rmita extendersp, desde «■! 
Cnnada por la Florida Oriental basta Pansacola;y desiie 
alU sa'ora f'ciimente abríi>e cumiuOj basta donde le li<i- 
mc la ««d insaciable del 010. 

Mirad utentameiite i la conducta del decantado We« 
Uín^'toQ cu Portugal, y rn £spuna. No os dexeis sedueir 
por* las relacionis aitinciosas ric este gentral, ui por lus 
de «tts adiila'iores ó panegirrstas asalariados. } 1 no cor... 
pronute iiunca sus tropas con las francesas: bace la guer- 
ra 8Íemi)re de parada ; presentase y huye. Si alguna vez 
es I btigado a bntirsc, los Portugueses son \sks vifiim.»!), 
. que expone al fiiego y al bierro cnemigo. Con los Ksf).»- 
úükSf se sirve de la misiua política: lot excita à la guer- 



jpépòvta ventajas considerables ^ ni camina sobre, 
nlan alg^no de ambiclon, ni sobre calcidos de me- 
jjoras pro£presiyas ^ ó de una g^randeza colosal .k 
{berza de amontonar exclusivamente riqnezas , y 
de paralizar los recursos natarales d,e las otras 
^n^Lciones. El goblerno Briianico es qaien ha^sabi- 
do eonstralrnn sistema comercial Bobre estos prin» 
ciplos ; y le ha dado la extehsloo mas asombrosai, 
Va^ta^ y absoluta por la combinacion de todas las 
luces ^ y la de todos los crlmencs» 

El sbtema colonial de las potenciasdé Europa 
je» simplemente na sistema conservador y defensi* 
yo; mas el de la Inglateri^es un sislema, .liostil, 
de latrpcinio , y . de invasion* Las polencias maci- 
.limas de Europa han dadp, à sus relaciopcs. con 
las otras paries del globo, nna fucrza dividida > 
però el gobierno Britànico ha dado à las que tiene 
xod los dosJiemisferios9.an9. ftierza fe4erat!va 9 6 
,iuas blcii el cacaeter de un yu^o qsçtàvi^adory 
iiniversaL 

El poder B^À^ïtiino de^ínglaterra no exi^tes^no 

.por que Europa no ha Uegado todavia a conocer 

|is«s fuerzas^.y'^ns recursos, naturalesa de. modb 

qne la sei;vidmnbre pesada y ver^onzos^ qne siifr:e 

aobre los mares , se conserva a efecto del ^secreto^, 

y .del orjg^ttUo ostentoso, çm . que Inglaterra -oculta 

fu pròpia íUqnesiça. Qç^cep^sd sobre su i§la^ ^ 

.v^ercis qnetAii colosal y altanero podecUk tiene. (lor 

bases la cobiM*djiii , y la corrnpieion na» exectü^l^•» . 

/Vos. . avi^gpnzareis de vec , caalés son los . hom- 

. jires qijic e)9. et\^ siglo de Iç^os <r de. filosofia ^y d« 

Valor , empniian el cetro scaoreador del Odeau^' 



Ved aqni en compendio el coadro gpeneral de Ui 
Europa. Los detalles no en trau en mi plan j j 
8e fiailan todos al alcance del pUcblo. 

El sistema marltimo de la Espana fae militar ^ 
y nunca político : cl ya no cxisfe. El de Ingpla- 
terra ba sido siempre un sistema de conqnista, 
>' de liosliiidades j y con él Iia eonseçaido el 
Impcrio del mar. 

El sistema marit! mo de Itàlia, anonadado des- 
de que se rompió el paso del Cabo de Boena-Es- 

Iieranza , estaba reducido desde eiitonces à on ca- 
)otajc mas ó meuoi útil. Venècia , confinada en 
sus islas , no podia contar mas con las Tcntajas 
del mar, que Napoles, Aucoua, Leorna, y Gè- 
nova. Por el contrario se puede decir , que la 
brjxula fue inventada solamcute para la Ingla- 
terra. 

El sistema maritimo del Baltico , ha sido siem- 

Í)i*e meramente de eomerci i : las poteucias qne lo 
laccn , se ocupan mas endereiidcr su neutralidad 
eritertl , que ea manifestar uu poder naval. El 
(l^obierno Britanico se burla, y se lia burlado 
siomp/e de estos vanos aparatós de neutralidad 
armada , que no ban servidu, basta aliora , si no 
para confirmar su despotisüno . ; 

Portuiipal ba limilado sus ideas à formar eolo- 
jiias^ y » oprimiria a: nunra tuvO verdadrro sis- 
lenia colonial , y ntuclio niesios lo tuvo maritimo : 
lia sido consccuenteineiite la presa del {robiei*iio 
«|uò se baMa bcobo seiior de toda» las colonias y 
tod^is Itw mares por un sisleuia combíuadu | pro* 
íttttdo^ } cOMslàat^. 



I lífl 

El de tlolanda no hé ** tetiido mas ohjeto que 
el comercio y la indústria. Se aproveelió dn au 
poder naval- para fonnar colònia» lítilea y precío- 
sas ; y no'triillÍTÓ la poUtíca mas qae un aolo m&' 
tante ^ cuando- se de(*lar*ó onemifpi de la Jujj^la- 
terra» La alianza del Stiithóiider , coti el |]pobU*r- 
no Brltauíco , fué cl primer {]^idpe inortai cpici hc 
dirig^ió contra cl aislcma mariiiuio y colonial de 
lo9 Holandeses i elios sufrieron el ultimo en Cei- 
lao 9 y en el Cabo de Bueiia Kspcranza. 

El sistema maritimo de la Franc'ia t'ué pnra- 
nieute colonial, y jauias político: lia síilo constan- . 
temenie debll^ alg^nna?* veces altanero, síeusprc 
costOBO y fbnesto , y stcmpre contrariado y opri- 
mido por los senorcs del mar: no ha tcnido nnn* 
ca un plan dirig^ido con saUidiiría , nr sostenido 
eon fnerza. La Franci» oeeesiln\ pues, de crear 
estc sistema con la di}|pnidad que le corresponde , 
para participar de las venta ja» coiiiues del comereif». 

El sistema maritimo de la Ing^hterra ba sido , 
por el contrario , sicmpre comerciante y siem- 
pre militar • colonial en las [jprandes cpocas , y de 
una política profunda desde principios del siglo 
éltimo. El lia tocado , en sui vnelo , a los postie- 
ros limites del mnudo: ba tocado tambien a los 
de la tirania ; y esta cerca de fenecer , desploma* 
do en su absoUita ruina.' " 

Se prncba de este modo , que entre ' todas las 

naciones que han . aspiraAo é' Sgpnrar en el mar , 

desde la invespicion deia bmíjnia , una sola ita Ma 

la c|ue ferm6 iin siatema tioaritímo , y lo b« se- 

g^l•llo con empeao constauto j .y por medio de 4AiU 



culos'ifeflexivaiiiéitle'coiAbiBadèst onk sola C3 íd 
qae ha dado una-eonstilueíon profunda à ms fder' 
zas navales, ua objeto constaale à sos trabajos 
nàttUcos^ y una doctrina capas defovmar es- 
pirita nacional) eou ordenanzas Tigidasj «y eou 
todos los medios mas proporcionadosa ftedncir 
y aaimar à sos faombres de mar. . < 

CAPITULO £3; 

JDe la revobiciím produúida enn un $ylo. 

Un sjglo ha baatado al gobierno Britdoíeo, pa- 
l*a iisarpar el rang^o de la principal potencia ilc 
Europa ^ y «n slg^lo ha sido bostante ^ para haccRàè 
él tirano universal. . .. « 

Este g^obierno Inchó, por muchossio^los , .con 
su debilidad natural , con su barbàrie, y sus pi^- 
terías habitualcs. Habiendo comensado por ser un 
,factor miserable dè al|>^unas naieiones de la Euro- 

Sa^ ha Ueg^ado a erig^írse en arhilroy legislador 
espótico de todaÉ las potcnciais. 
Lai^o tiempo de8)CoB<icido en la bahnza de *là 
Europa^ él no éoinénaé à fignrar.en élia , si jud 
desdevel.momento que saco partldo* de .las di^eor- 
dias y di^encioues 'impoliticàs qnc ban dübiiitado 
succsivamente, y destrozado é Firancía^a AusUúa^ 
y a'EBpaiiak 

latriganté Vi\, y {flrofundo , ha.sabido apronre- 
chaise dè las rivaüdadea, de las.^nerras, y de 
lo» viciós mistnos: de los .pueblos mas. respetablès^ 
fiara formar «ii ^randcza oolotal, sobre los de^ 



jpòjos y U rnina general. Desde entoncci DohM 
conocldo limites à su ambíclon y poder ^ ni k 

.^SQ tirania 9 y su sistema marllimo. 

Acordaos del omínoso d!a ^ en qae el tirano 

. Comtvell presento al parlamento la acta f|ie obií^ 
^ à todos los Tasallos de Inglaterra à esportar 
sus dlferentcs manlfactaras y produccioncs, pr^» 
cisamente baxo el pabellon liritaníco, y àoDoipó• 

. nçr de naclonalcs las dos tcrceras partcs de ^ 
tripulaclon de sos buques : acordaos del . d'n mç« 
morable ^ en qne el parlamento sanciono k acta 
que asegnra una gratificacion importante |or cl 
grano que salga de los campos lirítanicos : estàs 
épocas ban labrado la scrvídumbrc de la Europa^ 

. impotente y eicga, que no.osó oponcr dl&cultad 

. ni obstacnlo à estàs dos actas^ sub versí vas de sns 

. dcrechos y sus intereses^ ni a contrastarlas coa 
«na rctaliacíon competente y recíproca. 

JRl gobicmo Britàníco no poseia aules, ni agrl« 
cultura, ni indústria j no tenia poder maritfm^, 
ni miras polltices^ ni comercio libre. Estàs, dps 
actas ban formado su sistema inarltimo, y el 
de su agricultura y de su indústria, e:i tieip- 
po que las otras naciones no babian sabldo jEonr- 
marsc ni el nuo ni d otro; 

Estàs dos actas le ban proporclonado miras 
politicas, riquezas territoriales , y una acllvidad 
extraordinària en todos lesgénqros de indústria, 

.. cuando los otros gobiernos de la Europa nada de 
çsto tcnian, no cbslaut^ que Ic sobrabun nicdipa 
j)ara tenerlo todo. 

Esfas dos actas propondlau a aumcntar , inoe^ 



Í3A 

Baiilt'inente, rl poder maritímo cxclosivo, t la do- 
iiiíiiaeioo de los niares la mas irresistible y masab* 
soltit 1 ; en cnanto las otras naciones , impelídas ó 
excif idas é la guerra por este g^obíerno pérfído , 
se dcstrozaban rn el continenfe, >a por el clioqne 
sang^rlcnto de las opini ones reli|>'iosas, ja porta 
sucesion de alg'iinas faniilias realcs. 

Este sistema completo de política inarillroa ha 
dado toda la fuerza al g^obicrno llritanico; y la 
CDiistancia inalterable , en scgnir los priucipios de 

' esta politica, Ic ba dado la ambicion del |Mider, la 
intolerància del comercio , y la %enta exclusiva de 

'fitis manifacturas. 

Vedaqni porque este {j^obierno ba formado, con 
taiito empeiio , una marina formidable para domi- 
nar los niares ; y porque ba tratado sicinpre de 
impedir que las otras potencias creascn iucrza» 
liavajes , ó aumentasen las que va teniaii. 

Ved aqui por que ba intentado , con difercntcé 
tratados , oblig^ar à ciertas naciones à qne no po- 
t»eyesen mas qite un cierto número de iiavios ; y à 
utra^ a que demoliesen v arrasascn cnteramente 

' ciertos castillos que poscian sobre las nberas del 
Oceano. 

. Con ig'uales miras^ liizo disolver la compania 
de Ostende , y anonadó la dèbil marina de la casa 
de Àustria ; contrasto y dcsvaneció las primeraa 
operacioues con que la IMisia i•inprendió formar 
iina marina en Embden ; se enseiioreó de los puer- 
f os y de la escnadra de PoKngal t pnso con or- 
Ij^ullo iiisolente un comisario Britauico en nun- 
l(ei*tj[ue^ para impedir a la Fi*ancia que pudicse 



l^vanlar jaitiaft nna sola piedra «obre aqiiellas en- 
^itocida» piajas : atraveso el Suiid en pieua pa^j 
cayó sobre la baya de Oo|>eiia{;ile ; y tavopeeídií 
por la amistad y conKaiiza del int'elíz LhríslUm 7'^ 
desernban'ó en 8u ca pila i ; y despuen üe iiaberia 
'i*c•[fado con la sangpre de veiiile y cualro mil He^ 
sus iiiQeetèies haòiíantes ^ voKió é sm atlaiierbi» 
bnques ; apríaíonó à toda la eseiiadra Uinainanpie- 
sa , y la lievó robada k ln|)^laleí'ra : no lia ee^a* 
do de destruir sucesivaniciite la marina E^panoia 
atacandoia en paz y en g'oerra: la sacriiicó eu 
Tolon , cuando era aliado de la Espana; y acabo 
de disiparla ültiinamentc, robando sus úllinias 
reiifMiías bajo el preleato de guardarlas y defen- 
flerlas , para que no pudie;»eu caer eu poder de 
loa FraiicèscA. * 

Asi venios , f|ue el sistema maritímo de las po- 
lencias del contiuenle d» lia sido basta aliora mas 
ijue simplenicnte defensivo ^ y que ei de la la* 
ll^lateiTa lia sido , y continua sieudo enferamcnfe 
«ifeuslvo y laustil, en los tíempos de |iaz de la 
niisma suertc que en los de g^uerra : que por esle 
inedio, ha Itegadoa U!4ur|)ar la^^ colonias de las o- 
tras naciones^ a sonorear todo el comercio; ya 
dar lo ley despoticamente sobre los mares ; à 
Boracter la Europa a su voluntad , y a la depen- 
dència servil de su^ artificiales riquezas. 

£s evidente , pues, que [tara conleuerla cu 

* Tal es el infame gohierno Britanicn , <\nc , fccimrlò m 
rnganof , on caliaU* 3^ nnnejos, iiit(*t;ta destruir ía« fuerzaf 
vavalei de KurO|ia, para avasallat «1 tuunJo ent*^^ 

L•l traductor. 



feus jiistog iimltedy '^ obKgarla à depotiee la 
terrible ía la sobieraiiía maiútUna^ debe la JBuropa 
adoptar iffli slsteam ofeasivo caa la eoer^ía y la 
fuerza poderosa que la eoirre»p€Híiili^> .esLe es el 
lempeno que ha tornado sobre. si el gobi^irao* F4'fiii^ 
ces,, y en cl se £ímdaa las. |iia$ Imonjcras y 
ye^tnrosas esperanauis del genero Jiiunano. 



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187 
h^ LIBERTAD DE LOS HUBES , 
O EL GQBIEBNO INGLÉS 

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DESCÜBUERTO. 



UBRO *reiicsno^ 
CAPITULO PRIMERO. 



Refleccioncs generales. 

Mochos filosofos y polIt!co9 Itan demostrado 
los viciós y los abusos nionsttÍni»os del gobicrno 
Britanico, en sn org^anizacion y consti ttrc i«n im 
tcrior i mas . yo no hablo sinó de los qne SOU 
relativos a su poliíica t/ conducta exterior. 

La opresion de la Escòcia , la sucrte infeliz 
de la Irlanda , y la corrupcion escandalosa de 
Inglaterra, prcsentan, contra el çobierno Brità» 
nico y argumentos mas sólidos, y de mayor con- 
secncncia que los que forman los cscritorcs y 
publicistas f coando lo acnsan de haber vulnera» 
do la libcrtad, los privilegios, y la grande car- 
ta de sa nacion, ó ccnsurando su réçimen mili-* 
tar , Urbaro y anticonstitucional, su deaigu^ldad 
cbocante ., sn imperfeccion en la represcntaeion 



IS8 

naeionAl , sn Tenalidad on la Icjj^tslaf ura , sn àeit^ 
potil•lnm a||(yadq eii un parlamento septcnario , j 
8ii orjraiiizacíon friidal y arist()ci*at!(;a. V o no eiui- 
iiiinu^ en'oste momenlo, si no sa conducta y »u» 
relaciones exteriorcft , so ambicíon y sn sistema de 
paz y g^uerra , de navegpclon y comercio, so poli" 
tica, y siis formas diplomaticas, sus medios artl* 
Aciales de gprandeza, y ans onsas nnmcrosas j 
vcliemeiit(*s de doeadcncia. 

Otros escritores se han ocnpado tambien enfor* 
mar la historia de los progresos , de las fuerzas , 
y del despotismo inarilimo de Ingplaterra. Na ne* 
ccsito de decir por que medios tacticioA , y p*»r 
que manejos y vicioa del g^bierno , se org^auizó 
en Weiiimtster la tirania uniíersaL Los tres Hey* 
nos unidos poseen liombrcs de caràcter energfico, 
y de superiores talentos, que puedeu hacerlo pa- 
tcnte y sensible A la vista del pueblo ,* poiitíc<»s 
prolundos que deben remediarlo ; y almas anima- 
das con la llama santa de la bbertad , que concurs 
rirau prontamcute a disiparlo, en ei mcmiento que 
una potencia victoriosa derribe al e%ccrab)e gabi* 
nete de Sau-James. Londres misma coictaba mas 
de 80 mil ciudadanos virtnosos , largo tiempo ha , 
dcc:didos à defender hi íibcrtad y stn iucluir Íoa 
innumerables desgraciados que las atrores pros* 
cripciones de Pitt arrojaron de su |)ais, y obÜga- 
rou a buscar un asilo en Irhínda , y en lus climas 
extrangcros j sin induir , tam|ioco , los que ha hr* 
cho vagar [Mt los bosques y montauas de ía tiera 
EiM^ocia, el ascsinalo poUtlco de los iUuirs j 
Falmer*. 



1S9 
. EI joramento qne han liecbo , sobre la» arns 
de la übertad 9 Iv» voltintarïos Irlaiidcse», per* 
maiiece CBcrUo en todos los corazoncs , v traduci* 
ÓQ en todas Iüs Icnguas. El caràcter independen- 
te de lop uiotitanesrs de Escòcia es indehJ le. \ 
los Erítanus m'ismos ^^ no ba inflamado alguna»/ 
veces el cspíritu de übcrtad, en cl SSglo 17? 

El i8^, mas ilustrado, mas libre, y vrrdade- 
ramcute mas memorable por el nuevo órden de los 
sucesos poiltlcos, y por la marcha brillante y gran- 
diosa de la filosofia en los dos bemisferlos ^ no 
los et•nvida A una existència mas feliz, y uias con- 
forme é los derctbos y dígnídad de la especié bn- 
mana ? ^ AIo los convida a lavar la mancíia de cpie 
los ba cubíerto un gobierno atroz, y sobre todo^ A 
abolir so tirania exterior ? 

La monarquia nniversal de los mares es el sis- 
tema sobre que trabaja el gobierno Bi*itanu*o « un 
siglo h^ y con el mas Fervoroso y constante aiibeloj 
y sus rcHultas son la decadència de todos los otros 
pueblos 9 y la posesion exclusiva del comercií i que 
ha tomado sobre toda la tierra. El odio de hi na- 
ciones se ba inflamado, de mas y mas , conti*a es- 
te gobierno en razon inversa de los progresos de 
su anibicion , y de las infamias ile su coiiitrrSa» 
Desile las ribeias del IVeva baòla las del A^anza- 
nares, y del g4>iro Adjriaiico basta los Dardane- 
ios, el nombre Ilrltano se oye con execracion y 
btirror»... ^ Però que digo? Desde la Europa en* 
tera basla los confines del globo no se coi»oee a 
Ingiaterra si no por i»u tirania, por sus latrotú- 
níos y j por si*s violeucias y maldades. 



' íQ^ coDcepto^ iïsL Terd&d^ poede formarse tíe 
im paeilo, cuyos plratas infestan a todos los pal- 
fies? ^ myas erabòrcacíoiies €id>reii y oprimen a 
todos bò mares? ^eoyas gineas €<irrompeii à 
todos loi {^obiemos , y coya politíca bàrbara j 

are^llíisa insolfa , bícre y boinilla , y dcstroza à 
todos Ics pQcblos ? ^ Pacde acaso darar , por lar- 
go tíempo, esta potcnria crimioal y escandalosa ea 
nedio uc nacíoucs cívíU^das y de pacblos mari• 
fhnos , t comerciantes ? 

El C!|)ectacnlo del Meditcranco inradido y es- 
claTf zaiG ; del Bsíltíca oprímído ^ y de los dos ma- 
res soiseUdos al yuço atcrrador y ufaoo del Ta- 
mesis ^ iebe conmovcr a todos los eslados : y slla 
Europa, conoec sns interescs^y los de la nnia* 
nidad citna ella no tardarà cu acorralar a los B rU 
fanos 9 icl mísmo modo que ellos acorralan a siisi 
iúnidoai rcbaiios* * 

La ^aoia de la justícia y de la llbcrtad nniyer- 
sal , d(?be triunfar solenineinente de los çrimenes 
borroK)SOS del {jabiuete de San-Jamcs j à menos ' 
que la^ naclon Britànica j vicndo ya cercana sa 
rutna I y la desolacion de su país , no despierte 
de su profuudo letarg^o , y no derribe , con sus 
propiüs uianos, al gobiernoperversoque la ha hecho 
el ob^eto deí odio g^eneral de la Europa > y de 
]as mildícíones del mundo entero» # 

La Iiig^laterra que fué , durante algunos inter* 
iralos^/la tierra clislcadela libertad , como lo» 
reUmpagos son la luz de las noehes tempestiici 
sas, perdió esta libertad inestimable^ en eirey^ 
HAdp de Gcifrge 3o ^ por los crimeued reitcSradoa 



y espantosos del abominable PHt, Ella^umstra 
cadenas de oro^ 'pero -iio dexàn de ser cade» 
Das pesadas y destraetoras : el despotismo mi* 
nisteríab^e -hs remadió^ d dià>l dedleiembre 
de 1795: y acaso, la esclavitud verg^onzosa qae 
sufre , deoe ienecer i los esftierzos de )a liber- 
tad que se levantc con intrepidez en el suelo 
I)rít4ní<t0t/. del mismo modo que be'nianifiesti| 
siemprc en .medío dk la» reTOMeiones 5 y snele 
ser cl. friUo.jfloríoso 4k•los sacríficios sangri- 
entos de. un . pueblo • ai»ér(pco. 

Yo eixaiQÍno^ pne», s» cl (j^obterno' Brithnieo 
puedc spr. duradero < dígpo qoeno•.Esnn j)oder 
contra oaturaleza: «a nn poder monstrnoso y 
facticio : su gobiemo es subversivo del derécbo 
de, geut^'., y de ]ft libertad misma de sa na? 
ciou; cai. incompatible con el interès general de 
todos los otros pueblos ^ y no pnede coneiliarse 
de modp alguuo con .las inces-, ni con el esta- 
da actnal de.la Europa. 

Conienzarc pi:obando, qne es un poder eon» 
tra nataraleza, artificial,- y monstrnoso en sn 
existència , en sas mcdios , en sns rcsultadoB j y 
en sus proycqtos. |Ia'7é . ver despnes j cot^ò €s- 
tc poder extraordirarto ha influido sobre el ca- 
ri^cter de fa naciun , y cualcs son los efectos que 
ha dcbido píròdiícír en su país j y en los extnui<- 
geros. 



"I 



11 



16ft 

GAPITUUè a,* 

S^mcjamle Gebíema es mt poife» cúnira» 

naiwralezm• 

Va Elector de Hanover ^ eonYertido en rey de 
iiiia isla y noeve mínistroft^ al^pinos lore» feudales, 
algiiiios obispos lutefaiMMB, y alçano» oradores 
Ycnales, he aquí la cumparaa queoprime adiez 
mlllones de Iiabilautea sobre el sueio de la Iiigla- 
lerra corrompida , aobre el de la Irlanda ensan* 

ÍrcnUda, y el de la Escòcia reducida à serYidum- 
ire. * 

El gobierao opresor de estàs dos islas del O* 
ceano , qeíere dictar leyes à todos los pueblos de 
la Europa; dirigir 9. segua su capricho , las alian- 
sas^ylos tratados de paz ó de guerra de las 
mayores poteocias del coulinente ^* y usurpar cl 
eomercio , la luivegacioa , y la indústria de todas 
]as nacioBcs del ranudo. 

g; Un eflfoerto queda aun què bacer i la Franc ia, decia 
un generoio flacocós : « La Francia no combaté contra el 
« puéb)o de liiglaterra, sinó contra un centenar de malva- 
« dot' que lo oprimen. . Çue ellos desparézcaU} y la paz dú 
« Uflivevso eitií resta blecida/^ 

Carta de Tfiomas Muir, escrita al Mimstro de 
Policia General en el dia 8 de líit^oso del aHo 6. 

Este bonrrado Escocès, entonces lefugiado en Francia^ 
«onocia perfcctamente los viciós dtl gobierno Britanico y j 
ki votoa qoe liac« por tn paiS| no etiàu lejua de realiurae 



1 



163 

Sflte ^bierpo prefende hacer i toda k ücrm 
^epenclieulè dé éu agrieuUiira'y de su comercio , 
de süé uiaiiifacluratii y de hua ai*tet»aiios: prcteiide 
exportar é importar exclusiiaincnte todo por sns 
biurinod ^ y auii bmjued. Prt* teiide de ig^oat liiodò 
iiaVejfar solo en todiía los mares, dominar en todos 
loA ríos , eabos y y eétreehos ; estabiccer colonias 
en todos lod puutos dül aniyers»; y mònopolizar el 
comercio de todas là^ òiacioués. < 

Vedaijui por que el*' g^obieriío de esta isla osa 
Incliar contra una naciou gucrréi'a y ag^ricola qne 
se compoiíè actuainiente de AS Ihillones de Iiabi- 
taiitcs es|iarcidos en los |iaiscs' mas fertilcs de la 
^uropi : y su tcmeridad insana Uo{p al extrema 
de qucrerla impedir que sca comeà-ciaute ^ iiavç* 
(l^adora, y líbre. ' 

(loiï la misma osadia el gobierno de f millo- 
nes de liabitajítc^ , intenta, coiituiuar sn despatís- 
mo kobre la Europa entei^ , que cueilta mas de 
Ires cientos miltohes : y po^ este mcdio , una isla 
de 12(i fejjiiàs de Iwqo y 100 de anclio, seria 
iuas poderosa i)úe ia Europa toda, que abrasa 
una estènsion de 350 mil le[|^uas cuadradas. 

Asi tambien, ui'il mil lones de Ii<lbitaotes , que 
cnbren los dos bemisferios 'de ía tierra » la- 
brarian inci^santemeute sií suelo, se oen|iariaa 
cii las manifaeturas , en el cultivo , en las artes j 
la indústria , producirian fas materias primçras ^ 
y 80|}ortarian la esclavitud' y el trabajo, queia 
eodicía y cl org^nllo del g^(>bierno Uritanlco qui^ 
sicsen impoueriesy y todo csto |Nira el bien par-» 
ticular de los {fobernantcs de una i^la qQe'%t bif 

5, 



464 

Lara por largo tiempo y J^ àlHi por taias làrgo 
tiémpo esclavd. 

^ Que espècie de gobiemo es este? <;QnaI la 
sido sn origeo? ^Qae espacio ocnpa sobre el glo- 
bo ? ^ A que rango podia aspirsdr 'entre las naclo- 
neà ? ^ Tiene a 4:aso medíos proporeionados à su 
ambícion 9 y a sos proycctos ? 

El formar UD panto impercepfiíle eh la i^rfií 
geog-rafica. 

Debe su origen i pescadores , i piratas y y 
a miserables traficantcs de un òbscuro cabotagé; 

No podia aspirar , por tanto , si no a ser ona 
potencia de segnndo órden. , 

£1 tiene nua poblacion redacida , y eTÍdente* 
mente desproporcionada é sus ' yastas y distantes 
colouias. 

No posee por si mismo , los medíos necesarios 
para bacer conqnistas , y mncbo menos lòa qae 
se nccesitan para conscrrarlas. 

En efccto; para bacer conquistat, se necesità 
d'e,un grande exercito jy la poblacion del snelo 
Britanico útí es ni aun snficicnte, para sostener 
una [>cqucna gnerra en Europa. 

Es indispensable , cnando se trata de armar 
una marina poderosa', tencr una poblacion grande^ 
iuagotablcy y proporcionada al Servicio del comer» 
cio de las coloniíLS , y à ia defensa naval de tan« 
tas poseciones apartadas y remotas. 

Paratener una marina nacional, y nn exercito 
éxtrangcro , es preciso poseer una cantldad in- 
mensa de mctalcs, y de siibsidios pcrmancntes. 

Vémos ,. pues , que la poblacion.de Inglatcrra^ 



no paede ofrecer i sa gobierno proporcion algu- 
na , con las necesidades que e:&igc la conservacion 
de BUS coipnias , y la de sa comercio. ^ Que es 
lo qúe bace , en este apuro , el goblern^o obstlna- 
do de aquella' bla? El àsalaria ó roba mariue- 
ros à las otras nacione^ : engancba à los suyos a 
fuerza de palos ó de sablazos : corrompé , y fomà 
a su sueldo soldados mercenarios de Europa ,. 
derramando oro j y engaiia , con artiRciosos tra^ 
tados, é sus gobiemos débiles ó venalcs. 

Asi hemos ^islo qae para adquirir riquezas 
metalicas , no ba cesado ^e robar las minas de 
Portugal 9 y de asaltar y devorar el comercio de 
Espana. 

. Pregunto abora : si una isla que posce nna po- 
blacion redacida , una marioa extraordinària y 
riquezas precarias é insubsistcules ^puede resis- 
tir à todo el poder de la Francia, mandar é la 
Europa y. domioar al mundo, csclavizando los 
mares, y despojando al hombre de sns derecbos, 
à los pucblos de su soberauía, à la llbertad de 
sns progresos, à la indústria de sn curso y vcn- 
tajas naturalcs 9 y al comercio de su indepen- 
dència ? 

^ No es, en cfecto, contra naturaleza el go- 
bierno que se ba organi/ado de tal modo que 
no puede existir si no tlranízando la navegacion^ 
oprimiendo los pueblos , dominando sobre los 
continentes , y constituyendo una supremacia 
orgullosa y absoluta sobre el unirerso cnterO| 
en unas pequenas i%las que acaso arrastraron las * 
olas del mar en otro tiempo , como d•spojot 



Die8c|uÍD08 y desmoronadps de la masa grandiosa 
de la Eurcma ? Una inon.struusídad poUtiea es^ 
6in duda , £i existència de este g-obieiiio' anibi- 
cioso (juc ka adqulrido el iiiiperio^c la UéiH*a 
por suà úitri|>;as, sus coutinuus siibsidlos, y sii 
couslanlc aiikelo en fomentar y so^tener la g^ucr* 
ra j y cl luiperlo del mar ^ . por sus escw^jlras^ 
y por su eoanereio illmiladd y exclusivo. 



tÀPITüLO 3.« 
2>e/ MaK 

m 

La naturalesa distribuyó el mar & los d!feren« 
Ics pucblus (|nc babitan en los eoutinentes. El es 
on ptríuianio eoniun a todosj es una propicdad 
universal. 

El nnturalista lo llama tl lindero de las nacío* 
ncs; y el eoaiercíantc Ic e«Misidcra como el Ulne- 
rarío de todos los pui^blos. 

El piditíco Ic mira eumo una ({^ratfdc balanza 
del poder, el filosofo lo contcnipla coino un me» 
dío vasto de coniunleacion, entre las faniilias ua- 
lueroüas que eompiuien la espècie bumana. 

£1 moralUta, sienipre austero y firme en sus 

{>rincip!os , uo descubre en él si no el mas pesti* 
éro alimento à las ri(|^ue7'as , al luxo, & la coi*'- 
rupciòu ) y a los victos y calamidadcs pavorosaa 
« de las uaclones. 

Mad, él fjfobiérno Itritauíco presclude de to» 
èlíà ésths íaédú y priucipios g^éuerales: él tra« 



c 



* 167 
ta al mur como eaclai^o siiyo; leencadeími éaaa 
mlras ambicioBas , y à aus horribles asorpacio* 
nea; lejj^ce cemplice éé aus crknetfes^ -qale^' 
re ^persuadir àl mundo ^ qae el OenetàM es ntf 
doniin.io patfAaúlar ,de la Inglaterra^ nin campo 
cerrado qiie so{i> c>l la pobde lahrar, àt^èaéevy ^ 
usar para aii Servicio excliisivo. ^ 

2 De que mudo tan d'rfereiite no piensa^el -gi^ 
btcrno francès ! Al proelainar los dareehos de 
los puebios, él no ve en la libertad de los lÉiares , 
si no sa debida reslitucion al derecbo üitoral ; la 
observancia solemne del dereebo de {^entes ; la 
propiedad inviolable de cada- pueblo^ y los inte» 
reses sa||;rodos de cada potencia» «.^ : 

Factles de prever,.cttal de los dosfjfobiernoa 
debe triunfur en e.4ta (ncba ; si seré el que no se 
propone en sus victorlas^ otro fin masqnela de- 
fensa y la conservació» de los |irtncfpios eteruoa 
de la natoraieza ; ó el que bo liene otro objeto^ 
en sn despotismo y usnrpaciones ^ que el de sosté* 
Dcr y perpetuar un poder contra la naturalesa 
misma. De un lado , se balla cl interès odioso do 
los tiranos ; y del otro , se presenta cl de todoi 
los puebloa. 

CAPITULO >§*• 

Dehs puebhs. 



Casi todas las nacionesliodan coo'•I "mar , per 

E randes ríos, jfw babiaa «MMi cr as ao , é por di* 
liadaa costaa. 



J 168 



Xa naHu^leza distribiiy^ de tal modo !a irraií 
famuia del genero hninano^ que cada úno éísfrutc 
de sos dereehos partieolares sobre el eleaaelfto co» 
man i todos. 

Abríd la carta del globò^* vcd , como en loa eoii- 
tlnentes Uadaa los pueblos eon el msírOccano ó 
el Alediterranco \ con el Mar Hoxo ó el Mar Gas- 

K*o ; eon el Jlar del Sur 6 el del Norte f y con el 
altico ó el Alar Negro. 

Apenas ise exeeptuan algmias hordas salvages 
que babifasal otro làdo de los Apalachès , y las 
tribus Tirtatfas que viven mas allà de k famosa 
muralb da la China : y jiuti estàs inisniàs obs- 
cnras famOias de la espècie liamami , las( eondu- 
cen sos gcandes ríos a participar del patrimonio 
comun^ es dccir , del mar. 

Tal es el fuadamcnto indeleble de los ' dereehos 
de lodas las fanulias humaoas , de todas làs socie- 
dades poUtícas, y de^laamismas hordas salva* 
gesi a lo4as.eorresponde el gozar de la pesca, 
de la navegacíon, y del comercio , segun ^s fner• 
zas 9 sn poblacion y sns luces, y sus neeesida» 
des. 

IVo obstante, el goblemo Britànico eierra la tis* 
ta é tan sagrades axíomas : crec que él solo existe 
sobre la tierra, cua ndo trata del mar. Rodeado 
de sus altivas ffotas , eree que su poder no tiene 
mas limites que los del anehuroso Oceano. Sn 
dereeho natural , es la fuerza ; su derecbo de gen* 
tes y la in justieb \ sos leyes ^ la sed insaciable de 
•n arabiciott } tkVA tratadoa , el interès particular de 
•n comereio; y su diplomàcia , la perfidia masa- 



tro2,y el mas insolei^e orgallo, ^Hastti cunnd^ 
safriremos este trastorna de la nioral ^.y ei»ta iguo*: 
miDia y calamldad horrorosa sobrç la iieirra? . # 

CAPITULO S. 

V 

De las Islqs. ... , 

Una isla domina al mundo enlcro, y oprirne 
el comfercio general de todas las nacloocs* ^Ea 
este j ^or ventura ^^ ^p destino ? 

£a natnraleza formó y colocé i las Islas , eei:> 
ca de loB contlncntes y de los golfos^^. para garan- 
tir é la tíerra contra la furla del mar, y no para 
someterla y epelavízarla. 

La política se apodero de las islas para civUir 
zarlas y defenderlas ^ mas de n^ngna modo , para 
erigirlas en sillas de la tirania. . ^ 

La historia nos hace ver que cllas, naturalmente 
inclinadas a la libertad por su sitoacion , no pue- 
den menos de ser politicamente esclavas por sui 
peccsidadea. 

Algunas veces se han constituido en peqnenas 
Itepublicas , indcpendentes y zelosas , però sicm- 
pre dominadas por reyes , ó devoradas por la aris- 
tocràcia. 

Mnchas veces ellas han mendigado socorros, y 
la proteccion y alianza de los Beycs vecinos ; y 
casi siempre han estado , en los diferentcs paise^ 
de su localidad , somelidas ó sojuzgadas por el 
continente. 

En efecto : si la superioridad puede ser uql de- 



170 

recho , à loís eontínentès perfeirece el de riéynar 
sobre las islas , en razoD de los ipcdiòs poderosos 
y permanentes qne poseen , y de las necesi dades à 
qae se hallan siempre expuestas las íslas , de inodo 
que no pueden prescindir de los soeorros- y pro- 
teccion de las potenciké conti iientales. 

De esta manera se han visto las Cycladas en 
el Arcliipielag^o del ülediterraneo , sucesivamenie 
aometidas é los Eg^ipcios , à los Persas , y à los 
Griegpos ; y las del Canal de la Mancha doinina- 
dasporlos Ronianos,por los Sa joncs, p($r lod 
Daneses, y por los IVormaudos. .*. 

De igual moto se ven actualmente las Antillas , 
en el Arciítpielagpo Amcricano, sometidasa los 
Franceses , à los Kspanoleà , à los Holandeses y 
à los Brilanos. 

^ Porque motivo , pues , las islas Britanicas se 
lian eximido de este destino comun y natural à 
los paises insufarcs? 

^ Porqne , en lug^ar de Labér sido sojuzg^adas , 
han llegado i erig'ir en su sucló niismo el trono 
formidable de la tirania? ^ Porque, en lug^ar 
de ser simplemcute indepcndcntes , se ban cons- 
tituido senoras y dominadoras del mnndo ? 

Yo cncaentro dos motivos ; el primero es , que 
los Britanos se ban apoderado , como la Republi- 
cà de Cartag^o , del imperio de los mares, por sa 
comercio ; y el segundo, que se ban apoderado , 
como los Ilomanos , del imperio del continente j 
por la gpuerra. < 

Los Cartag^ineses eran crulmente exclusivos 
iobre el Mediterraueo j y la política astuta de loa 



171 

Itomanos ex'^'taba la (pierra <»n el contiricntc , pa- 
rà ciitretcnor à todos lod pueblos qiíe podriaii so* 
juz{pi'lo9 , y para sofucai*, por cstc mcdio^las 
divísíoiics iiitcstliius en sti inismo suelo. 

Si cl g-oblenio Ur!(aii!co ha reunido, como ve- 
.mos , la política de Cúrlago , y la de Roma , para 
dominar cxeliisíva y dcspoticaiiicute sobre el mar 
y la ticrra , à las naeiòhes todas , incuinbe cl de- 
Lcr proc'ioso y santó de redimir su Kbcriad y sus 
derí'chos , abatícndo y cxterniinando , de una vez^ 
à CSC nionstruoso y bàrbaro g^obíerno. lle otro 
modo j SC trastornaria la suerte y cl destino de 
l<>s contiiicntcs ; y la mas infame tirania , org'a- 
nizada çnlre los obscuros pciiascos de Albion, 
jcontínuaria cseíavizaudo à la espècie bumaua ea 
todà là circunfercncia del oflobo. 

CAPITULO 6.** 

Consecuencia polilicu de esle gobiernú» 

La dominacion insular, establecida en la Ea* 
ropa , se arrastra con orgpullo a fundar su im- 
pcrio devorador en todos los paises del uníverso^ 
reducicndoios à su obediència y servidumbr^ 

Oliàcrvad la marclia secreta de la política am* 
biciosa y fi*cnclica"* del g^obiemo Brilanico* 

Se apodera de la isla de Ceylan , para ex- 
tender su tirania sobre el contiuente de la ín- 
dia ; de la Alartinica , parà doiÀinàr sobre el 
golfo de M exico ; y anhela por Manila y > con 
el objeto de asegurar mas su altiyo cetro, en 
mares del Sur 



I7« 

. £l.fle establece, d^ igual modo, en Gibral- 
tar , .efi las Ulas J^nicas , y en Malta , par^ 
líranizar al Mediterrineo» 

Tiende au vista à las islas Canarias, y à las 
de Cabo- Verde, para dominar mas ampllanieute 
1^6 mares de Àfrica y de Europa , y sliuarse 
id origen principal de los vientos, 

. Se enscnorea de las blas de Falfcland , con 
el objeto deextendcr, un dia, sn infame ccti*o 
spbre la America Meridional; y de las de Balia- 
ma j para formar çavernas à sus bambrientos 
piratas , y asallar' desdc allí, barbarameutc, el 
comercio de la Europa y eldelosEstados-Unidos. 

. De esta suerte, la douiinacion insular cüLticn* 
4e la esclavitud sobre los pqeblos mas numc- 
rosos, y trata de colouizar à los contimeutcs. 

En verdad ^ el gobicrno Britànico ba reali- 
zado ya una parte de este vasto proyecto de 
la dominacion insular: ha colonizado al conti- 
nente deia índia des de Beng^al^* al de Àfrica, 
desde Cierra-Leona ; al de America desde el 
Caàada ^ y al de Europa desde Portugal. Ha 
çoJonizado à todos estos continentes en benefi- 
cia de una sola islà Britànica. ; Que horribles 
y. funestas son las consecuencias de semejante 
pdder coniriBi^[natnraleza! 

CAPITULO 7.^ 

, -> De los continentes. 

Ellos deben à sn legurldad pròpia 9, y à la 



i ' 



«FS 

, dig^nidad de Iqs pnèbloa que los Jhabitan , el 
extcrminio de 'esta doníióacion insukr ; {poar- 
dandose, al mlsino tiempo, de establecer ó con- 
sentir iglial dojònnacion y -tiraoía en 'A saelo 
continental. 

IVosotros vemos qnc los contincntes estin sa- 
bordinados à las léyes g^cnerales , à los* prin* 
cipios éomuiies deia justícia^ yà los ;dérè<ihòs 
de la Igualíiad y la independència de las nacioneB. 
'. Si on èontinente osase oprimir al otro, «ela 
odiosa tirania no podria existir largpo tiempo. La 
Europa se Vera obligpada, por exemplo ^ à' libet*- 
tar à la índia, no solo por sn interès propio,^ 
lio por obedecer a los dog;uias de la jasticià eter- 
na. La lünropa fia contraidò y firmado esta dev- 
da sag^cadít en et pacto del derecbo de g^entes: los 
^^obiernos continentales la lian identiíieadò Üon la 
'de la libertad^. ' Beng^al , eiiiàncipada y 'redimida 
del i^SOj nos libcrtara de la dependència de Lon- 
dres ; abriendo el mas copíoso mercado al comer- 
cio dé todas lo» pueblos. 

" Ijas potcntías Éuropcas qne poseen cohnnas en 
iàs dos Indias , no debcn iener otra perspecltva 
mas que la que ofrece y reclama la líbertad del coh 
mercio ; ó vcran descollat la independència de es- 
tàs mismas coloniaa , cnanda ellas se encuentren 
ya cansadas dcsn lar^o sufrimiento, y resneWàn 
apelar à la fuerza , y a los dcrecbos inagenables 
que las dispenso ia natoralcza. j Pneda esta voz 
rcsouar en todos los g-ablnetes de la Europa,' y 
'obiijprlos a diri(pr sn política |ior los pnacipioa 
inviolables de la jiisticia comun t 



•«■.♦ 



1Z4 

CAPITULO 8. 

Meuuion monstruosa de toios loií 

• ' « • » 

generós de poder. 

Si en algana partc del çlobo exisf iese un f^m- 
bierno que , llcno de una couiianza y sen^uriciaÀ 
orgullosa , hubiera rcunldo a todos los víclos íb» 
teriores 9 y a una tirania douieslica , todoa lo» ge- 
nerós del poder que las otras uaeiones reparada* 
mente poseeu , y de los euales basta nuo solo par» 
produeir niuclias causas de decadència y destruc- 
cion ; SI algun viagero ó filosofo nos dijera , que 
semejaute . gubierno se coiiser\ aba desde larga 
tienipo en niedio de naciones llusti adas , v ai lado 
de sociedades politiiras que ttetuMi un terninrií» iih 
nienso ) una poblacion copiosisi im 9 y irnj fueiza 
la mas poderosa é irresistible ; i^ qnicii de uosolros 
daria Crédito a lo que se nos referia? Contodo., 
el becho és pòsitivo: cl liobierno Britautco'e%istc; 
y liace un sigtu que tiene reunidos, rn sua uun is^ 
todos loa generós del poder* Vedios aqui breve^ 
mente descifraclo^. 

Poder naval ; base primera* 

Poder peeúuiaríò , a^ente general del comer» 
CIO) de la nayegacion, de la marina ^ y de I* 
cormpeioo. 

Poder com^eial, fundada sobre el espirltuí 
de sa nacion misma* 

Poder federativo reaulUda de 9U aistema co» 



17» 

Poder poIiticQy efSecto odioso de sas iAtrigas, 
y de sua riquezas. 

Poder lasular, motivo de sa odio contra los 
pneblos coolíiientales , j el que le dicta ta ue- 
cesidad ó la iaip >rtaucia de oprimirlos y destro- 
xarlos. 

Poder tlrauico , consecueocia necesaria de tan- 
los medios, y tantos poderea reaoidos. 

EI (j^obieruo Britanico qiie , segun la coDstItii« 
cíofi de.8ii iiais, do tiene exercito formal , trans- 
porto k sa marina el espiritu militar y de conquis- 
ta, 

Nopadiendo senrirse del entusiasmo «religioso^ 
para cl apoyo de sus. mcdidas y proye^tos, inaptr 
rò à sa nacion el fauaüsmo del comencio, j el cvUi^ 
dçl Bccerro de oro. Por este modo anadió é la 
ambicioo de los flomancg 9 y al fanaVismo de SSa 
lioma , el orfi;ullo despotico de la preemiíienm 
marítima ; el de la supremacia comercial ; y el ds 
la domínacion de v^staa coloniçs* 

Fue un tiempo en que el nuiversp se bizo Ho* 
mano, por el derecho de ciudad. 

Londres aspira à que elunivcrsose liaga Bri« 
tano, por el derecho de esclavitud. 

Mas si el gobierno Romano ^ que poseija roe« 
nos polilica y menos poder, con menos exlea« 
sioo de territorip y dominios y y con mas fueratao 
reales y solidas, na desaparecido ; ^ cual debe 
aer la auerte del gobierno Britanico que reu- 
ne todos los generós del poder, y todoa lao 
viciós, del despotismo à la cofrapcion de laiv 



riquezas; y qne Im oprïinidò y nhrijaclo al. 
inundo entero ? 



«» 



f « < 



CAPITULO 9. 

£/ Gobiemo BrUaiiico se ftatftf . oi maxU 
munti ée- la fortimà colonial 
if marítima.* \ ' 



» • > 



• « La InJylal(T^a' se cnéactfW sobre cVihàr *^,* 
exefama Reyòàt^'^^ en el mísmo cstddo k qae haliia 
(( lle{]pado Roma sobre la tienra, coaqdo ca^^ó des- 
•'pedasada desiie la alta citmbfe de sa {^rànde- 
c<-«sa ^\ Tal «9 el crisis qae'afnena£a at coloso es* 
pavtable de«li Tét-toià mari^ftüa. 
. ' El tratado depac de 1763 seria bastante* parai 
establecersà fortuna colonial, con mucba sope- 
rioridadéla de'loè Romanoé/qne se apellfdaban 
•éiiores del-mündo. Conserrar la Acadía y el 
Canadà ; poseer Lnisboürg- ,' y todos los ' estable- 
eimtentos de Tefra-Nova; obtencr de los Eispafio- 
les la Florida^ dominar en la' Jamaica, y en mtt- 
ebaa isliis delg^olfo Mexicanoj tomar lodas naestras 

I^osesionesy'factorías en ei Senegal j eiclnir a 
os Franceses de todas latf colonias estàbiecidas 
sobre el Ganges ; y poseer exelusiyamerite à Ben- 
fal , y los temorós del Mogol, pareeia set el ter- 
mino de' la ambición mas desmesurada:* 

Mas el gobierno Britanteo no sé contehtS con 
csiot enlarevolüsioD de Francia^ eoncibió" mas 
iGaatosproyei^túOr No solo' ^bó* li losFradcrses 
li^Alartlnica , y las fortiiicaciones de San Kieo- 



177 

ias ) en la isla de Santo Domingo ^ si no que tam- 
bien anadió , al número de sus coloiilas , las íslas 
de la Triuldad, Trínquemale , Ceilan , y el Cabo 
de Baena- Esperanza : últliuamenle ha extendido 
sa mano csclavízadoíra à todas las islas y establccl- 
mientos qne la Franclay la Holanda poselan en la 
America y en el Asta ; y con la mísiua ambíclon 
insaciable, calcala el medio de devorar à los pun • 
tos mas ventajosos en uno y otro contlnente , à 
favor de las revoluciones y vlclsltudes qne eÚos 
experlmentan. 

CAPITULO 10* 

Cuestíonef importanies* 

Las islas son bijas de la tlerra^ yno deben 
jamas domlnarlas. 

Las islas como despojos arrancados de los con- 
tinentes , por los fenómeoos y catàstrofes de la 
Aatnraleza , deben estar constantemente enfrena- 
das y Gontenidas por los grandes principio» de la 
política. No conviene permitlrlas el qne formen 
jamàs fuerzas navales formidables, ó el que es- 
tablezcan por si mismas sa aegurldad Independen• 
te y absoluta, por que de este paso uo bay mas que 
ono à la amblclou , y al dcspotlsmo marltímo*. 

Las Islas uo deben nunca ser independentes y . 
poderosas , y guerreras , si acaso se desca man- 
tener la paz de los contlncntes, y el derecbo co- 
mun sobre los mares* ^ 

Sa independència y su poder se' hallan en U 

i2 



178 



liífttom eonstantemeiitc anmcíbdos por calamida- 
des naetomdesy por viciós geocndea j horrorosos^ 
ó por el despotismo maiitimo. 

Corinto em cèlebre por sa cuito Tolnptooso , 
por sns TÍeios dominantes ^ y por sos rlijnezas co* 
rroptoras: esto fué lo qae ocasiono sa ruïna» Ve. 
necia se hizo conocer por sa orgallo^ y sn comeiv 
elO) por una liga demaslado funesta ^ y por sa 
pròpia tirania; estàs fueron las causas que labra- 
ron su destrucclon. De todas estàs blas comer*- 
eiantes y dominadoras , no existe ya mas que unft 
solat ella ha inyadido k todo el globo poí sa co- 
mercio ; Irrítado k todas las naclones por su polí- 
tica ; y corrompido k todos los puelaos por sua 
riquezas. Esta mlsma tirania opulenta y odiosa y 
es la que debe arrastrarla prontamente al úl•* 
timó preclpicio. 

La política ofrece desde aqui nna leccion im*- 
portante à los pueblos del continente x los con- 
vencé de que no deben permitir jamàs nna Inde- 
pendència total k las isks y ni consentir en que se 
eleven a Metròpoli de un g^ande imperio , ó de 
un goblerno que Ueve la ambicion mas allà de los 
limues «aturales de su país. I Serà preciso, pues, 
someterlas ó esclavízarlas ? De mngun modos 
però es iadlspeMable obligarlas à la moderacion, 
y é los priacipios constantes de la justícia natu- 
ral , y derecho de gentes ? es Pi^eçiso hacerlas 
depender del eontinente parasn fellcidad, y para 
la íeuaUad respectiva : conviene asociarks al ré- 
mmen politicO| comercial, agrícola, y adminls- 
iKftivo de los pueblos eontinentales. 



17» 

^ Se extenderà entonces sobre d|M la Tara de 
Ja tirania? No por clerto. Se les debe seSalsr na 
régíincD provincial, ó de departamento: se les à^ 
)ie demarcar constituciouabnente eomo parte inr 
tegrante de un territorio continental , ó como a-. 
liadas dependí^ates de las poteneias de Europa^ 
j Que conTulsiones , y que desastres y crimenet 
no se iinbieran evitado à los pueblos y à los impen 
rios de] mundo , si un sistema > como este y na* 
biese sido promalgado y sostçnido ^ un siglo Ui t 
La tirania jBritanica no hubiera inancillado ja^ 
inàs la bistoria de las naciones* 

^ Serà preciso oprimir ó sof ocar sn indústria ? 
Jío i però es necesario limitar sus fuerzas navales, 
ó impedir que las formen à ^u arbitr^çij por que , 
de otra manera , veremos establecerse y renovar* 
se en la tierra gobiernos monstruosos J gobiemoi 
contra naturaleza , que , no teniendo una grande-r 
9sa real) ni una fuerza relativa ^ incesantemente 
corrompen el principio vivificante de las otros 
gobiernos , y cuhren al miiverso de calamidades^ 
violenciasy y peligroa. 

^ Gonvendra, poes, respetar supersticiosa^ 
mente su constitucion? Si ella es el manantial d<^ 
despotismo practicado sobre los mares j si ella na 
se alimenta si no de los frutos de la tiraní|i 9 si o 
lla es feudal y ambiciosfi ; su destruceion importa 
al interès de la £uropa , y é h paz çençr|| 
4e) mundp, 



J 



CAPITULO II. 

Jln gobiemo catUra naturaleza es siempre m« 

juslú y tirano» 

, Poco tiene que témer la Europa , de parte de 
los goblernos que poseen riquezas territoriales ^ 
mediOB 8Ólido8 y permanentes ^ y una fnerza pú* 
blica exteriormente conocida y respetada» Slas 
todo deben témer las naciones 9 de parte de los 
gobiernos que no ticueu mas que un poder facti- 
cio y recursos artíficiales , una debilidad real y y 
nn grande aparato de poderio exterior* 

Los primeros son justos , por que conocen sn 
fjuerza verdadera ; y los otros son opresores y 
por que afectan orguUosamente sus recursos y su 

Soder. Los primeros ticnea el genio conserva- 
or^ y los otros el de la usurpacion* Los prime- 
vos no necesitan si no de consolidar sn poder en 
Ip interior, y gozar de las venta jas naturàles de 
UI. propio suelo : mas los otros no pueden existir 
8in crear proycctos audaces y desmedídos , y sin 
tnrbar à las naciones , irritando sus pasiones y 
sus rivalidades pra tener tiempo de extender su 
iMubicion, y aumentar su poder en lo exterior. 
. ;Los gobiernos coutinentaics no necesitan mas 
que de si mismos ; y por esta causa , permanecen 
spgnras la existència y la libertad de sus vecinos. 
Por el contrario , los gobiernos insulares no oe- 
san de buscar medios auxiliares para existir; y ved 
aqui el origen de la turbulència general. ^ AIo 
es esto lo que vemos en el gobierno Britani* 



18t 
(CO , y lo que , en la gerie de na sigla ^ le|ha coos- 
tituído arbitro despotico de los mares ^ ypep» 
turbador y azote geoeral de los cootinentes ? 

Este gobierno no tiene ^ en lo exterior , mas 
qae una aparieneia seductora 9 y un orgullo odio* 
so à todos los pueblos. En lo interior , excrce 
una barbàrie desoladora y vergonzosa é la hurna^ 
nldad. 

Su fuerza pública exterior es fantàstica y de* 
lezudble : dependc de las olas y tempestades del 
Oeeano ; de la desesperacion mlsma de las trU 
bulaciones de sus buques • y del Incendio que 
puede reducirlos é cenízasj en inedio del mar ^ 

Ír en los puertos. Se vé obllgado à córrer basta 
as eidremldades del globo, para defender sus 
coloiilas en las dos Indlas, y .para bostllizar sus 
enemigos en los ültímos puntos del Mar del Sur. 

Su estado insular aumenta su flaqueza propIa| 
en razon de las cuatro cientas leguaa de costa 
que tIene que defender : uo puede contar ' mas 
que sobre mlllclas tndiscipliaadas y débiles ^ y en 
reducido numero ; 6 sobre ia nutldad de un exer- 
cito de tierra à que se opone , sin cèsar y la cons* 
tituclon Britànica • 

El orgullo de la preemiaencia maiitlma ocuL 
ta , en este gobíemo ^ au debiüdad natural en ei 
seno de su isla ^ y le hace olvldar su nultdad en 
la guerra exterior, no obstante que cUa forma 
lina larga tradicion en la blstoria. 

En los siglos últlmosy el gobíemo Bril 
to se habla pnesto baxo la proteccioa de los 
continentales. 






I8d 

Ma0 corre >^ tinsiglo, tpe lia comjirado sil 
segnridàd y sa independència absoluta con cl pro^ 
dacto de sn comercio osorpador, y por inedio 
Úé los exercites ^ y gnerras fomcnbiaas en el 
continente* 

Desde qne le ha faltado cstc lí'ecnrso , y qae laS 
alianzas , en la Europa , no se propocionan it la 
satisfaccion de sus proyectos , éi acnde à la ràbia, 
àl furor , é los crimenes 9 y al asésinato. Se lè 
vé sieiilpre traihando, como un frenetico,» en 
los gfabinétes del Norte ; y sin escarmentar en 
los desastres qne ha hecho sofrir é las potencias 
que se han doblegado à su inflaencia abominable, 
respirar incesantcmentè la pei^fidia, la seduccion, 
y la hostilidad èn medio de sus cortès y de sus pro* 
TÍncias. Es como ^el genio malheclior qtie solo 
Se complace en las calamidadcs del genero btr- 
mano: él no puede existir si no entre las rui^* 
taas y la dèsolacion general de los otros pueblos^ 

CAPITULO 12. 

Un úoKèH'no coníV'a nottitalèza es necesaritr" 
menfe un fodet facttcio» 

Un gi>ande territòrio ^ tthà poblacion numefò- 
sa , son las dos bases natnrales y sólidas de un 
gran poder politico. Un gobierno medianamente 
bueno puede, con estos dos medios , elevar nua 
nacion al primer rango, sin oprimir a las otras, 
y sin valerse de fucrzas auxiliares. 

El gobierno Britanito ba sacado todo él part- 



úo posibk de m térritorio. El Iia amnentado 9W 

rblacion, prodigando^ con barlMirldad ioa&fdUa^ 
sangre de los babltautea de la Europa, y aluHK 
vaodo la de sua subdltoa. 

Apesar de estàs medidaa y calcoloa estadiado^y 
no deiui de ser alempre el poder maa artlfieial 
que ha existído sobre la tierra» 

Cirtago, i lo menos , posda la poblaeion de 
toda el Àfrica; Aténas la de an contiuenfe fèrtil;. 
y Venècia la de sos provincias de Tierra-Firmes 
y niognna de estàs ires potencias maritiokasy cob* 
cibió la vasta y borroroaa esteosion del sistema 
colonial de la Inglaterra; m tenia que defender 
«u tirania marítima. 

j Quales son, pnes, los recorsos del gobienio 
Britanico? ^Acaso los efectos deso Acta de 
navegacion ? Ellos serén nnios ^ desde el mo^ 
mento en qne cada nacion marítima reeonozca 
sus derechos, y pnbliqne otra semejante para 
sn comercio. Las fuerzas y inquezas de Iní^ 
glaletTa denenden de la voluntad de lo» elros 
puebhs r al instante que ellos rectifiquen su 7e- 
gislacion comercial y tnariiima. u la de sus adna^ 
nasypuerloSj lagrandezacolosaldelfueblo Brita• 
nico desaparecerà como un relampayo qne no 
de va vestigio en la atmosfera y donde inHkmdó y 
deslnmhrò alpueblo iynaratite y débiL 

I Sus numerosos navíosf Ellos pneden ser 

qnemados en sug mismos pnertos. ^ No lia hecbo 
el ffobierno Britanico qnemar i los nnestros én 
Toion , y expnesto los de Espafia al fnego de nu* 
estros castíllosy cuidandosolode salvar loa soyea? 



184 

j ítM^ tasas para el pa jo de fos intereses coc- 
respondieotes a los ca pi tales tornados é presta- 
mo !••• Elías han stibido ya à nn qnadruplo $ 
ellas excitan las qncjas , los clamorcs , y la 
desesperacion universal de la Inglaterra. 

{ Los prestamos !.. La deiida pública del 

gohierno Britànico subía , anos ha^ a la enorme 

suma de 892 millones de libras esterlinas que 

llacen la de 4,257,000,000 pesos Fuertes; ella 

ha aumentado progreslvamcnte dcsde entonces, y 

à penas puede ya somelerse al calculo» ^Seri 

posíble que los despotas de la lug^laterra pnedan 

seryirse auu por mas tiempo de este recnrso, 

Tiolento y moustruoso , que arniina las gene- 

racioaes presentes y ias venideras? Sin embargo, 

ello6 no ticnen otro para sostcncr sus fuerzas 

navales , y la tirania orgullosa de sn comercio y 

navegacion. 

jLasformas Aploma ticas !..•« Elías han escan- 
daÚzado k todos los gabinctcs^ engaiiado à todos 
los gobiernos ^ y provocado la execracion y el 
horror de todos los pueblos* 

Resulta de todo esto, que el goblerno Brità- 
nico j como poder contra naturaieza, solo existe 
por sus robos , su tirania, y sus crimencs; que 
todos sus recursos son fragiles y momentaneosj 
y sus riqueza? , ilu^orias ; que su grandcza es 
tan odiosa como percccdcra; y que basta, para 
disiparla , un soplo de la Europa. Si la F ràn- 
cia continua sus esfuerzos , cacré precisamente 
despedazado este coloso de oro, que tiene los 
pies de barro, y d^tüa saogre de toda au mole. 



*> 



.188 
CAPITULO 13, 

De la corrupciom política 4et gol•iemo 

Britànico^ 

A nadle se oculta, que la veoalidad es el 
principio fundamcíital del gobierno Britànico : 
con él la corrompé à la nacion , ^ y^ fortifica el 
despotismo. 

La mayoría del parlamento es nna propledad 
Yincnlada al trono; y cl ministerio se sirve de 
ella con impndente orgullo. ^ A que exccso no 
llega la comipcion política eo un pneblo, cnando 
el poder legislativo està subjngado , y depende 
de la Yoluntad absoluta del dèspota 7 

La mayoría corrompida del parlamento dlxo 
al Rey : « mantened lo que nosotros llamamos 
(( balanza de Europa y en beneficio de la Ingla* 
c. terra : y nosotros os daremofttodos los subsio 
(( dios de que necesiteis: nada nos cucsta el sudor 
(( del puebío. Poco importa que la deuda pública 
íi llegue t ser incalcutable» Dueiios del comercio 
c( del universo , sn monopolio pagarà tpdos los 
a gastos por enorme» tpie sean. '* 

Ella dice con igual cfrfasis à la nacion : ^^ 
(( hemos tomado iia cabo, una isla, una colo- 
« nia : poseemos algunas radas , y algunos alma* 
(( ceues y factorías mas. La extension del co* 
« mercio pagaré todos los crimencs de la po« 
« litica, todas las violaciones del derecbo de 
<( genteSy la pérdida considerable de núestros 
« soldador y maruiero8| y la del honor nacional/^ 



r 



186 

Esta mayor/a no piéma eonio el pneblo Bri- 
tanico; mas trabaja para hacerie pensar como 
ella. IVo calcula como debla hacerlo defender; 
pera medita profundamente para seduclrlo y cor- 
Iromperlo. Esta mayoria no es la nacíon ; no re- 

Iiresenta la opinion nacional : es nna faccion lema- 
ativa, subordinada al ministerio j es unpartido 
antípatiriotico^ vendido al trono. 

El g^obiemo Britanico|lio desea nuïs que el eH- 
l^andecimiento de coloiiias y de comercio, para 
ocultar , entre el esplendor tastuoso de las rique- 
zas, el espectro inmundo y horrible de sa 
tirania. 

El ha seg^uido este plau con perscverancia, no 
solo baxo Cromwelly si no ig^almcnte baxo Jacob 
1.^9 baxo los usurpadores 9 de la mtsiíia snerte 
que baxo los Reyes legitimos. Con tal que dé à 
la nacion un impubo favorable para la prosperi- 
dad de las manifacturas , ó uoa extension nueva 
para et comercio, consigue deslumbrar à la mul- 
titud , y ella no atiende à las injosticias,al azote 
continuo de la guerra, à las violencias mas exe- 
crables , à los horriH*es 9 y al oprobrio que son 
la cosecha mas pingue de se moostruoso go- 
bierno. 

Con una TÍetoria naval , él seduee à los Brità- 
nos^ y hace que no sientan los desastres sangncn- 
tos de la Irlanda. La posesion de una nueva co- 
lònia , cierra sus ojos sobre la opresion de la Es- 
còcia. La toma de un cabo à los Holandeses, lo» 
tranquiliza sobre la invasioii de su pròpia libcrtad 
y prerrogalivas. El bill , 6 decreto qne proscríbe 



187 
las asamUéaA popakres, 6 el qnè deslnlye su li- 
fcertad civil, caeu en olvido al paoto que EUtot ó 
Dancan triunfan , y obtienen la dignidad àe 
lores. 

IVo hày coda, pues, mas airerigpaada y pa« 
lente , que los medios infames, seductores, y per» 
Versos de que se sirve el g^obierno BriUnico, 
para continuar exaltado en la ibAïiàJbrè del de^pè- 
tismo* Su venalidad y corrupcion han Ue gado al 
«xtremo de la depravacíon humana. 

Este g^obierno derrama el oro a manos' Uenas 
en los gabinetes pollticos , para dominarlos. Pa- 
ca enòrnies subsidios à las nacíones guerreras 
para destrozarlas , empobrecerlas, y tiespoblarlas 
de mas y mas. El resultado que se propone, es 
obtener y conservar una preponderància forml- 
deble sobre los reyes y pueblos abatidos , y man- 
darlos con el oi^Uo mas insolente. 

El otOy en sns manos, es un medio eficaas 
para estorbar a las potencias maritimas , todos los 
proyectos ütiies * ó los progresos qnè puedan ha^ 
cer en la marina y el coinercio. Con el oro , 
sufoca la indústria en los paises extrangeros ; 
pag^a los asesinos , y organiza un sistema de pi- 
ilage , y dcvastacion sobre el mar y la tierra. 

EutrC sus grandes criraenes, sobresale'el dé 
inflamar y asalariar las pasiones mas viles y atro- 
ces en los individnos ; como el de fomentar to- 
dos los viciós y desordenes en los pueblos Eu- 
ropeos, k fiu de tenèr é su disposicion los ani- 
mós , ó un partido considerable para sns nego- 
ciaciones, y vns intrigas poliiicas» Dc esta ma- 



*88 

Hera ba podído promorer na molin^ * at tiempa' 
que el gobicrno Francés celebraba cualqaiera de 
0118 tratados en la Europa ; y temiendo el goipe 
vengpador que amenaza su exterraiuio en la època 
presente , uo cesa de atlzar la discòrdia y el fue- 
ço pòr donde quiera que &e le admite , ó que 
puede intròducir el oro y la corrupcion. No da 
un paso qae no siembre delitós y maldades. Tod<^ 
lo emponzona ^ y todo lo reduce à la pràcti- 
ca atrOz de sa maquiavelismo J destruir para 
retfnar•. 

CAPITULO 14. 

PoUtíca de los Reties de Jn^t Uerra» 

Vemos \ que mientras la politlca de los reyes 
de Ing^laterra obstruye ó eiifrena los estableci- 
mientos comerclales de los otros pueblos en Euro* 

* TodoB saben 9 que el gobierno Britanico tiene por 
postumbre antigua el pagar revolncioDes y inotiues ; y que 
por este medioj ha conscrvado à los pueblos de Europa ea 
^u dependència y servidumbre. 

Cuando el célsbre ministro Margues de Pombal, qubo 
mejorar la agricultura y el comercio de Portugal, estable- 
ciendo una companía nacional de Vinos de OportOy el 
gobierno Britanico dispuso y pagó^ sm perder instantes, 
vn mótin borroroso, en Lisboa. Así se baüó, por la cen» 
tesima yez, en Li sangre de los que, alevosamente , Ua- 
inaba sus amigot. 

Con iguales motinet tangríentos, snscttados y pagados 
por el mismo gobierno en Paris ) se trató de retardar I09 
tratados ^ de paz entre la Francia y bs diferentes poten- 
.ctas coali^adas. 

Esta es iu taptícaf f ettt cl earlclef qoa dcftingtte m 
gtAH) ÍDÍcrBal. 



18» 
pa, anmenta ens posesiones coloniales en las cua^ 
tro partes del mando. 

Esta política se anuncia siempre Hena de fan* 
farrouadas 9 y de una jactancia hiuchada y alta- 
iiera contra los pneUos del continentei para disi* 
mular el temor que le causa el projecto de unà 
invasion en su ísla , ó para distnier de esté 
peligro eminente el pensamiento del pueblo Bri« 
tànico. 

Se ocupa eontinuamente en los medios mas 
propios à encender y exaltar las imagínaciones^ 
y en los de mantener en sus cludades un es* 
píritu publico de mar y eomerclo , euya base 
es el interès personal j c«yo pretexto es el or* 
g^llo de la nacion ; y cuy«8 fruVos son el patri- 
monio exclusivo del gobiemo ^e los emplea, 

1>ara sedncir y tiranizar en sa propio país y ctt 
os extranj^ros. 

Trabaja por excitar la codicia popular, ostett« 
tando la admirable extcnsion del comercio ; exci^ 
taqdo la ambicion de las riquezas; y haciendo alar- 
dc de la multitud y la importància de sus colonias. 

Con esté -prestigio desplega su plan, y divide 
sus medios o^ensivos del modo siguieute: guerra 
en Europa j invasion en las colomas } y traicioa 
y crimeues en todas partes. 

Ha formado dos listas civiles de grande opu- 
lència ; la una interior, Totada por su parla- 
mento à principio de cada rcynado ; y la otra 
exterior , pagada con el oro - del Brasil , coii 
el de Sléxico, y con el monopolio del comercio 
universal. La primera , le sirve para pagar la 



190 

mayoría de los Totos necesmrioa à la adminia^. 
tracion interior ^ y la segonda^ para eorromper 
y asalarlar à los ministros intrlgantes y Yeiiale& 
de las córtes Earopeas. 

Con la una , oprime la Escòcia , incendia la 
Irlanda , y desmoraliza y encadena ia Inglatrm; 
eou la otra , atiza el fucgo de la discòrdia y de 
la g^uerra en el Norte y en el Medlo-dia: pro- 
cura deslumbrar a todas las naciones del mun- 
do , y liacerles creer lo qne es mas opuesta 
à sus líiismos intereses 9 y d los dereçhos nm 
aaulos de la naturaleza. 

CAPITULO 15. 

Continuaçion del itit^mo articulo^ 

TA org^ullo de la supremacia marítima, dedu« 
ce su orig^en de los rçyes de Ingiaterra 9 y de 
el los, se deriva ig^nalmente la tirania de su móns-» 
truoso gobierno sobre la Europa. 

En el siglo decimo y Edgaroy rey de Ingla* 
terra ^ juntó cuatro mil embarcaclones pequenas, 
y se creyó ducno absoluto del mar : intenta 
apellidarse a Emperador y Senor de todos los 
a reyes del Oceano y y de todas las naciones 
uque él eneierraJ''^ 

£n el siglo dnodecimO) otro rey, el cèlebre 
Juan Sin- Tierra^ promulga una ley por la coal 
(( exigia^ baxo penas eorpòrales, el saludo de 
(Uodos los baques extrangeros.^"* 

En el siglo decimo quinto, Eduardo l•^y man^ 



191 

dó i sns oficiales de marina, aque mantuviesen 
ihu soberania sobre los mares •''' 

En el siglo deelmo septlmo, Càrlos 2.® hi«i» 
àcunar dos medaUas con las inscrlpclones si^ 
guientes t ce el Imperio del mar està en huestro 
« poder : el mar nos tributarà IkomenageJ*^ 

AI Bn del siglo decímo octavo, George 111^ 
publico , i la faz de la Europa y é la de todo 
el universo y las palabras que voy é copiar , y 

3ue son el epilogo del orgullo mas Insolente, y 
e la mas andaz tirania» 
í<lSu Magestad permanece en la intencion 
tt inalterable y decidida ^ de no admitir propo* 
4K sieion alguna de parte de sus enemigoSj reUu 
utiva à^Josyítrecho^ y pretenciones de las nació* 
K nes maritimas»^"* * 

^ ^ Puede llegar i mas el execrable y feroz des- 
potismo del gobierno Britànico , la insolència del 
tirano de los mares, y el insulto y oprobrio de 
todas las aaciones del mundo ? 

Galeulese , por estos resultados , la soberbia de 
los reyes de Inglaterra ,* la influencia de esta monar- 
quia en sus màximas constitucionales » y la cor- 
rnpeion de sos ministros. 

CAPITULO 16. 

Efeetos de la reaccion recíproca. 

Lo que vayàdecir, pareceri una paradoxa} 

\* 

* Vease en laii;|yiezas àt la negociacion de Lila, auo 5.% 
la cai'ta del Lord Gi^nvilU al Lord MaUnesbury. 



192 

mas, los pòfiticos jaiciosod encontrarài en ella a* 
na verdad Importante y sòlida. 

La eonstitiicion de la monarquia Britànica ele- 
vo su poder naval ^ y el poder naval no ha cesado 
de alterar , y corromper su constltuclon. 

De igual modo hemos yísto y que la administra- 
cion pública de la Europa , se ha complicado por 
süs establecimientos en las dos Indias; y que estos 
establccimientos coloniales han alterado, succ« 
sivamente , los jg^obiemos del contlnente Eoropeo« 
La. Inglaferraha trabajado y adqoírído , de este 
modo y mas que todos los otros pneblos ;y de con» 
sig^iente , ha padeddo mas alteraciones en la forma 
y en el espiritu de sn^ohlemo» 
' La soberanía que exercieron los gobiemos de la 
Europa y sobre las otras partes del mundo, ha si- 
do^ dcsde el principio^ vacilante y desobedecída^ 
y casi nula ; mani^stose dcspues violenta y o- 
presiva ; y este periodo marco la època de su 
decadència y destruccion. 

IVo era posible que esta confusion, esta anar- 
quia, y este fogoso entusiasmo de adquirir, po* 
sèer , y tiranizar , dcxase de influir sobre los 

Sobiernos y coustitucioücs de la Europa. El 
e los Britanos , prolong&do hasta el centro, 
y las extremidades de la ticrra,* mucho mas am- 
bícioso y opresor que todos los otros; debia nece- 
s^riamente experimentar la mas fuertc rcaccion* 

' El efecto de la poUtica de los reyes de Ingla- 
terra, ha sido el aglomerar, baxo Én cetro, la 
màs dilatada tirania maritima,* y el delacoust(<* 
tucion Britànica f dar un aumeuto progresi>o y 



195 
{Mnio^ )i estOd «ssoliados dtf MI iioBlica MUiUy 
de 8v «mbieion dçseufrenada. 

Probando consecueutemente 9 ^pie sa detpolia- 
mo sobre los mares dimana tambíea de sa ewisli- 
tl•lcion y yo demoàUarc que la constitacion misuHi 
debe sofrir la saerie eorrespoadieiite a la tirattía 
maritíma; es declr^ qae como ella, debe ser proa- 
taineute reformada* 

El g^obieruo Britónico qae trastomando y cor- 
rompíendo los principios faudameatales de k na- 
cioo , por todo géuero de medios y >ioleac!as ^ a^ 
brio cl sepulcro para si mísnoM), y para la domina* 
cíoo marítima , lo ba simultaneaoieoie abíerlo jm* 
ra la constUucioa de so monarquia. Esle es el d- 
níeo biea que poede b&beir becho é las islas liriti• 
nicas, y s la Europa. 

Sosteng^o, poes, qae la tiraaía marítima de la 
loglaterra , que es en parte la obra de la pcditica 
de sos reyes ^ es de igoal manera en parte el efee» 
to de so eonstitaelon. Por tanto y eonviene qoe es- 
ta eonstitocion monàrquica sea destroida al mis- 
mo tiempo qoe cl poder maritimo exelosivo ^ con 
qoe insolta y oprime à todas las naciones» 

En política de la mbma suerte qoe en íisiea, 
no bar aècion ni reacciona la de la eonstttucioa 
Britànica lailza^ con foerza poderosa ^ al gobier- 
no de continoo bacia cl imperio de los mares ^ y. 
atrae y dirige la reaccion de este despotisnio, sflK 
bre la constítocloí» misma ; la eoat baee al goiaer- 
, no tirano de los mares ^ y le coarta el espírita waí- 
litar sobre la tierra. 

La eonstitocion verdaderamente haoé à oilò 

15 



4»4 
/fdM^m^ tirano 4e k Enropa, proliiln«idoTeal 
lakttio tiempo el qae piieda «dmiür «jéreilos eoa» 
tuieatiiled, en sa isla. 

Si lo« reyes de Inglatem hobieseii pédido em-^ 
plear à sa ^olantad , en las islas Britànicas', la» 
tropas del continente, ellos las hoUeran sometitla 
/inUitarmente^ eselavizando euteramente al pue» 
blo Britànico. Mas, como no ban nodido encade» 
narlo' con los ejémtos qne les bubiera sido fàcil 
llamar de la Enropa , por qae la eonstitucion Io> 
probibe , han tomado el reeorso de corromperle 
yeüfrenarle con las riquezas del nniverso. El co> 
mercio ha becho lo que no ha podido emprender 
la'E&pada. 

' Aesalta, qoe del espirita de la eonsliiaciott 
Britànica ha hrotado la fortuna marítima, que sir* 
Té de basc & la tirania del çobierno, en lo exte-^ 
rior. Dé eiita fortnna marítima se ha elevado fam-- 
bien el dcspotlsmo que ejerce , con tanta orael*- 
dad en lo interi(Mr , cl mismo g^òbienio. 

Constitnido en la ciina de la tirania, i ftterz% 
dè poder , él proToea cl odio de todas las nacione» 
de Europa; jà cstas ncccsariamente interesa ^ 
et -destruir la eonstitucion sobre que se apoya taa 
funesto y abominable coioso. 

' Se ha becho corruptor, i fuerza de riquezas t 
y Icon este oprobrio, excita la indjçnacion ener» 

Ifítú: de los hombrcs librcs en el suelo Britànico ^ 
OS' caalcs contribuiran , con • fervor *y aiborozo ^ 
à irèformar la eonstitucion de sn país , y til gobier» 
no que ella ha producido, ó toleiíEado por tan- lar» 
gó' tiempo. 



. tes 

CAPITULO 17.* 

JhfbieAmdel Gobiàrnk\emUranaiur4Í^^ sobre 
' -las cosíwnbreSf las virtuies^ y ta iniusiría 

de un pueblo libre» 

Los gobiernos son los verdaderos preceptores 
de los pneblos. . De ellos depeode el que sean 
•virtaosos ó corrompidos ^ çnerreros ò pacificos^ 
ambiciosos ó moderados , instrumentos de la tim- 
nU. ó de la libertad. Los gobiernos forman el 
«spiritu publico ; y hacen 4 ua pqeblo losto 6 ti- 
Tano y usurpador: contiertea el orgiulo naeio» 
nal en un medio útil ó funesto. >. 

I Desgraoiado el gobierno que corrompé la mo» 
ral de los Estados ; que altera el caràcter de los 
puebloB ; que substituye la aTàrieia i I91 genero* 
sidad nacional , la amblcion y la tirania à la de* 
fensa de la libertad , y el monopolio del comercia 
al amor de la pàtria I {Desgraciado el gobierno 
que labra las cajUmidades del mundo cntero^ j 
aacade ellas eltesoro de aus rentas péblícaa I 

Llega un momento en que los pnebloé cansa* 
dos ya del yngo , y ezasperados al verse ^ en la 
depftiiFacion > obllgados à seguir un impi|lso con« 
trario à sus naturales sentimlentos , se Tuelven 
contra el gobierno que los ba corrompido y ti- 
ranizado ^ y lo derriban. La naturalesa no for* 
mó al pucblo Britaiiico opuesto à la bumanidad y 
i la beneficència. Sus costumbres^ como obra 
de la clviilzaclon « le bacen hospitalario J però 
•us costnmbres ^ corruiiipidaa y dirigidas por la 

J 



196 
política, lehacen birWo, insensible, j feros. 
Ved aqni el inflajo de su g^obierno. 

El poeblo Britftnift\|/o%> iiloJatr«: dt h ^ li&ev• 
tad en otro tiempo : inas ^ cl g^obierno le ba en- 
cadenado , y le ba converlido en un instrnmenla 
activo de sa odio iuvctcrado contra la Uberiad de 
las otras naeiones. 

Los pueUos se auxilian en sos revolucioneu, 
y se favoreccn cu sus de^raeias y calamidadcs^ 
por un instintú de biimanidad, por un movi* 
nicnto espontaneo de la natnraleza : mas , et 
gobieroo Britanico uo perniite à su pneblo, si 
no que se entusiasme y se eiuplec en Fuvorecer ' 
à las bordas feroces y sanguiuarias , é à las ua- 
^oues gfuerreras y det»tru4:ioi*as. Le Imicc pag^ar 
todas las çuerras; lo deslionra con sus atroei- 
dades / y lo asocia al carro de su tirania mari» 
fioia. 

Rl pneUo Britiínieo ba eombatido, por largo 
tiempo 9 con la esperanza dé cobrar su líbertad^ 
y ans dereebos : mas , el g»obicrno se ba ser» 
vido.de e^« conocimleulo niisuio, para organi* 
sar astutameíile su des|MUlsino sobre él, y so» 
bre los g^obiernos de la liluropa. 

£1 pneblo Britanico dcsea on comercio flore- 
ciente ; y ql gobierno se api*oveeha de cste mis- 
mo desco , para oprimir y usurpar el comercia 
de todas las nacioue:». 

La posicion insular babia proporcionado al 
pneblo BrIlàoicO) la vcntaja díe liaccr un cabo- 
tagc comun en Servicio de los otriS pueblos; y 
cl çidiieraa aprovechó esta posicion local^ pam 



197 
«rporlrtr é importar, eYclastramente, «1 prodacto 
de todoti lo8 iMiises. 

El ptíeblo briCanieo despleg^aba , pot la sitna- 
cion de íbu isla, atr talento natural para la nare* 
^cion y el coiiiercto : el gpoblerno aproveebó 
«TSta eírcHfMfaneia , para converUrle en monopo» 
lisla ', y aavc{faiite cx€Íii«(ve. 

Rl pueblo Jk*Uiítiico ama ta gplòria^ y admira 
ioa IAIchIos y ei ing^eiiio, ctialqiiiera qae fiea cl 
individuo, é la naeioti eii 4|tie los dcseiibrc. Mou- 
icsijiilit <fitó mas adi»jrado en lii];bt<rfli' ifiie en 
Fraacía. El adiniratHe Winter j (n^tét^iicro de 
los* Kfttaiios, ea 171^)7, reeibi<(, e»fn|>;ia terra, 
naywfes antansAs 'mtv en miig^ii otro pais del 
flHindd.. El iiiiM<M*tal ttèseítisko , g^fc de Ja con* 
feilcneÍMi airmada di^ l'olAitia , dcsei)ibarea en 
Ingpbiherm ; y el pftel)to le trílMita botriendgpcs. 
Lo» lio|nbres uia^ ihii4reir*de la tiaelon^ y tos 
patriòtas de Londres - le regakn * mia bermosà 
«spada;- 

Pero, en contraste de estos scnltniïentos y 
denioatnueiones , el {jpobierno Brítàtirco ciFra to- 
4la au glòria e|i pre|Niçar el despotismo, por me* 
-dio de ia «orrupoíon , y del comereio ^neral, 
por la fitersa y ia tirama ? emplea todos los rè- 
sortes de la ealniBOta, y «T espíoitad^é, la diplé- 
maeia, y sns (ryineas, para perder a lodòs los, 
boialires deingenio^ de talentos, y de^alet, 
que eonsaffran sòe tareàs , stis lucns , y stís fner- 
zas al triunfo de la Uherfad. Por lodas paries, 
iiaee persegair i los. eaerilores llberales, y Has 
alinaa generosas y repnblicaniM• Ha becbo proi- 



198 
eribir eu Franeia , ea Eseoeia , en ltha»ÍM'i ea 
Inglaterra, y en Itàlia i los Iiombres mas bene* 
meritos y decididos, en favor de la eansa y de- 
recbos del puèblo. fli^so pronunciar sentencia Jc 
maerte^ conlraloa famosos patriotas Escoceses, 
Thomas Muir -y Paimer^ y la eomuti, despoes, 
en una exportacion tan ignominiosa comoitira* 
luea* IIi:^o diezmar en Irianda à los patriotas, 
y qnenuór sns casas: mand^ abwcar, en Es- 
còcia, à los Defendersf * y acusar en Idglater- 
va, eomo^ traïdores ó revalneionarios, alos escvi- 
tores y pnldicistas enérglco^» 

Tal es el caràcter de ía corrnpcion espantosa, 
qne eierce el góbierno Britanico. £1 ^pierria 
siimei^ir a là Europa en la barbàrie , y ma»» 
iener al pneblo Brítanico en la senridninbre feu- 
dal í qnerria dividir, y alslar i las naciones de 
Europa, é fin de oprimirlas nna en posdelà 
otra, é reunir al mnndo tpdo. bato. Jos tdismos 
principios de despotismo , para oprimiria esn na 
solo Rolpe^ y amarrarlo con nna misma eadena. 

2 Qnien es , pues,' el que inoculo en el pue-' 
blo Britanico, donde tuvo su primera siUa la 
doctrina filantròpica , el odio mas rencoroso con- 
tra los Fianceses^ odio que se ba convèrtido en 
temperamento y hibito distintivo de sa nacion? 
El góbierno Briténicó es el autor de estasbo- 
minacion: élno puede ^aumentar ó conservar su 
poder si no por medio de las divbioqes qne, con 

•r .f 

* * - • -' 

I 

* Se refiere el Lector d Us anoueionti de la pagma 81- de 
••ta 6bri|-. El .Tradndot. 



la mayinr Mtiléaui, difande y sastieiie «Btre hé 

reblos vccinos.Estegfobiernohalevantado^ altre 
Inglaterra y Ja Francia, un nuïro enorme de 
, g!«erra8 GÍvileB y extrang^eras , de intrigas y tí- 
▼altdades, de corrape&an.y calnmniají y de stfdi• 
-«iones y asesinalee, y odio naelooali ^ 

i Quele imporla al pneblo Britanico, ipiela 
ülaatropía exatte el nombre de Sianhcpe^j qiie 
^W talcntos eivicoa de Fox y Skeridan^ 6 las ^pi- 
W^nes .firmes de Lambtan y Tarleton bonren- à 
la-fiémara' dejos coàiunes? i Qné le importa, que 
la elocaencia leg^al de Erskíne y Gws déftçn• 
^iin. los àllimoB restoa de la libertad id^il , y 
-i^ne la dewoerneia Brítàniea aplandaii làtloiSes 

Ïai Talor de ^HHn^netooke ? El despotíaino 4e 
itl bizo pasaír en trinnfò los bilis ^ 6 ky^ 
4|ue proflcriben las asan^Meas popnlares, y 'ea- 
tlUeeeu laotaaas quadroplaa: bizo Tótar-di «t# 
./MrriaoMitlo la continqacion deia j^uerra,' y.bnr* 
•iandose de los cbmores del pneblo *, y ué ia 
' oposicion de los patriotas ilnstrados. Là di^o- 
^ jnacia de Granvüle y Cartlereagh eontiànó in « 
sullando à los dereeliosmaritimbsde todas las 
nacionesy y sembrando la Europa de erimenes 
politicos. En .este mismo tiémpò ) él LordJPífx- 
fVïlliam vota la guerra de extermtnacion con- 
tra los Franceses : Ednmndo Bureke predica 
una cruzada de àsesinos contra este pneblo rege* 
nerado ; y el gobierno RriUnico pKcipitay 00- 
l»re. su propio pais, el tonreafteípavorcifeo de Üòdas 
las in£untas y erimeues•••• Vèd'aqui conm «n 



900 

ÇMmmo perv«no eórrompe- à h mcloii, y huee 
itmtiles sus vbtadcs» 

El pneblo Britéoieo babla todavia de sa liber- 
tad con jactancia : però ^ el g^abíerno no e^8a 
de redoblar coa iurpr sa despotismo. 

El pneblo pagra fasa» enornws para la defensa 
de au liberUu ^ y el gobieroo- quadruplica las 
tasas 9 para remachar las cadenas de sn eseta* 
▼itnd i le arnviça el oro^ j le carga de vergoa- 
soaos bierros. El pnebb» anliéla por la pavj y 
el gobieroo solo bosea wedios • de eteniiz«r In 
guerra* 

. Nada bay qae pueda animar lanto à los pa^fi- 
«adores del contmente , y enipenar sos grtüi- 
diosoo esfnerzos contra el lUtimo de ans enemi* 

Cl, como b inJHslieía inaolcnle del gobierno 
itínieoi y io ipiepaede «contribuir à la con- 
aervaiúon.de la libertad en lag^terra, cnando 
Uegne. el dia de las venganzas contra el atiniz 
gabiuele de San-James, es el amor qne tiene 
el pueblo Itriténieo à sns deredioa, y el joieio 
qac foramn los bombres ilnstrados^e aquelpi^^ 
oobfie hi penreródad de sn propiò gobiernot 

CAPITULO 18. 

Jles iiUada def gAimnw eoníra noi wra/eza, rèlà• 
' ' ' típmmetde d lmnaei0n BrUéfUea. 

■ 

Si yo bnll•lei^ de expresar todo lo que me ins- 

í^pca mlalma iaidignada contra cl gobtemo Brita* 

meo ^ relB$ho à sn nacion oprimida y opresora^ 



'201 

Tò ]^Mwrfai• pur nn declamiidor^ y cntDstdiU «ca* 
Jonido t mas 9 este carécterno eonfiene si no 
à los escrltores asalariados por no gobierno des- 
pótíco; no conylene si no à na JSiintttfufo Burke^ 
y otros como él. 

Este cspltnlo seré mas elocvente^ jmdeodo 
nso de las niisnias palabras. qae pronimciò ua 
representante Britinico cu oi parlamenta de sa 
nacion 9 -vedlas aqui fielmeafte copiadas* *- . 

« Si lafranqacza piidicse)^ à.lo inenòsiiiia.>¥es^ 

. « entrar en el Jengnage de io8 ihinishroa.; >> «^[ek- 

-maba ]|fr« Lanüitou , en la eamani de los teítiónes; 

'« si ellos osasen manifestamasielinteriofe de.8«s 

« eorazones , oiriamos grccléaiaenteiy .en^'estií ca- 

'icmara, el siguiente 'discursos»' .:: i: 

<c JNuestv^ objeto es-eneadenar Tncstras^mí^mis 

« almaai hemos eonseinttdo.liaceros deserac•ad^l• 

Mc como naoioa y eono individ«esr«'heflnossaiiii|«i- 

. « cado pI:esposade losJMPazc» de laoipoaar,^-el 

« padre de entre ans bljosi: bcaios satisÉclua nues• 

« tros capriehos^ obiigaadoioa 4 derramab àu isan- 

<c gre: hemos convertida Toesàraa cíudadtís e» de- 

. « siertos , y aaiquilado. .vnèstro 43iiinerciii i pera , 

, « todo esto es poco; y i mncita mas 6e» éxliendc 

fi nnestro designio. Deapues*de oprímiros^ y ar- 

. fc rojaros en la eima de toda». las caiamidadcs , y 

icdcsgraeias, as prohibiremos^baslaeLmi•flu» aÜTÍo 

« degeinir y quejaros. Abandonaes^ pues^a nues* 

« tra Toluntad : sin diferencia con los anímales de 

* Seccíon del parlamento de Inglaterra, el dia 25 de 
N«viembrc de 1796.'VeaiiM laa gacetai , y periódicot Bri» 
ÍÀak^^ ds esta fecka. 



9M 
4( MJef^'f ette es el dcber que e»; iaemabe. SS 
« Mimo leones genecosos y terribles, 'osaisensenar 
« lo6 díòstes , ofl redoblaremos b» èàfkmaa , y no 
« OB dexunemos jamad respirari Si oe atraveis à 
« erízar las erínes, y a rugir , os sojetaremofs con 
« né^frèno^y osi ibpediremos elvesoclio eon un 
« boasL-'Si é pefar.deesto, toieis anni bi osadía 
(c de Sjf lisr Tuee^as cadenas , y baéer con ella» 
€( algdift éiiido 9 .es- 'hàrémos exportar à la otaa 
«.psrCe do' los maces ,' donde podvéis.^ é toda 
fc Tiiestsa: eomodidad , 'reçrearos , y - delirar eoa 
K cl 'fimCasma- de esa « bermosa Úbertad ^ 6' que 
« nOsotaKM*'no daremos jamas, si no d ^nombre 
»• dfr «sedicion;.;-. '• ,, # . , - - • -) 

. Ved aqui la < tradneciòn genuipa y para del 
lengnage'^de los mínistpos ttriténicesí y lio obs* 
^fnntcfifls JBti£ry é'decnüjtos tirànieo»é infames 
- qne pvoposleroii àïà éamara , :f neron^- adoptades 
ta^ nmenayonà develos consíderaMèj insulta 
cl mas' férote y imas ímpudente contíà k líber- 
tad dei piwUo Britoilieo••,. f IVaeiòn ^sckTÍzada 
V ovgrilbsa/ tabas podido sofrir esté arrojo 
msolentede tos miuiBlrosy y jte vanaglorias de 
ser libre ! Aprende , i lo menos-, à mcrecer la 
dignidad yel earAeterdistintivo de li espècie ha- 
mana r - despedaz» tbs ' Ycrgonxosas eadenas 9 y 9 
cntonces , crceveiÀos 'qne balleu toda^ia , en el 
fondo de tu alma, los sentimientoa béirmosos do 
la lib^taíd y de la virtnd. 



CAPTrULO 19, 

Del eomereiante , del aríesané , dtl ban^sit^^ 
del marmoj del funcionaria publico y y del 
represetUaule Bvitàmco* 

Entnid ctt el gpbintte de Casílereagh^ 6 de 
nmo de los camercianies de Londres:, y abrtd 
loB líbroede sua especelaeioiiea poUticas, ó mev» 
cantiles : allí ^ere'is qae una mano àvida y emel 
extendió y friamente , ' et ealcalo sobre el im- 
porte de la qninquiUeeía neeesaria para haeer 
de^djar nülliures de Anierícanos y 6 eai^r «■ 
•buqae destioado à la compra- de negroa; y el 
àè los Iraudesy èoDtrabandosdel gidbienio B» 
ianioo , para extcaer la pkta de Sléiieo^ y ^ff^ 
tar cl oro del Brasil , à fin.de comprar vitea 
mercenàries parà incendiar y destruiria Enropa* 
Si la perfeccíon de iMarles os coninda:é entra? 
en un taller oélebre, obserVareis que /el dneno 
no se qneja de los males que la ffuerra pre« 
etpila sobre los bombves, mas solamenle de aue 
ella paraliza el cArso à sos mercaderias y eree- 
tos. Si le habkis de la paz , él* procura so- 
lamente saber cuantas colonias nuevas ha contfe- 
fuido la Inglaterra, y que consumo pueden pro- 
porcionar à sus fébricas. El llama sublimo y 
excelente política à la destmccion de las mantfaU• 
tnras Franoesas , Americanasy Espafiolas, que 
ha podido realizar la horrible intriga de los mi- 
nistres Britiuiicos; y mira con placer los viciós 
de la Europa , solo por que formiui la baae de 
. fill prosperidad^ 



204 

^ Qae es lo que picnsa aqnel Banqnists qae 
està daudo vucita k «us capilales , y fluctua ea- 
Ire la oeiosidad y la usura ? Por un Instante 
8e qneja dei peso euormc de las nucvas tasas: 
però redobla el agiotage y la osura ; paga su 
cuota; y no ae le da cunlado poé todo lo deniaa. 
A sn vista , todos Jos g^obierno» son igpualea y 
bHcnos , eoB tal que ét pueda ^nar y * enri* 
tpieeerse• 

Oid al marino : la barbaridad coinetida en cl 
cnganche de los tnarhíeros Briténicos, le siry^ 
de diversion : solo se aeiierda de la paga qne 
disfnita , eomo Instromeiytu à* la tirauia marí- 
tima. Rceibe y executa 9 Ison eiega obediència^ 
ks ordenes mas atroces del A:hiibaiitaz{>^o' dcsea 
conservar -SQ' plaza, y uo-trata sluo de bbcde- 
cer maqnlnaltnente a ío-qne se le nrnnda; :La8 
piraterús' y atroeidadea. que eomete 9 le airaeii 
el odio y la- iodignaeion de todas los poebloBs 
mas 9 éi se ^nsuela exUiiidièndb la vista por 
la esfenr ilimilada y prodígipéa- del eomerbip y 
-navegaeion de su país. • 4^ < 

El templo de las dolibetacaones naeionale» se 
«brc en VVeiBmister : ou' orador se 'presenta, 
y habk df k opreston de. Escbcia , y del vé- 
gimen militar de la Uanda. Una sola toz eon- 
4e8ta k sn disenrso, y es k de nn mínistro : él 
jostiliea todos sus atentados, apoyaudola en k 
«eeesidad denna policia fuerte contra los akiros 
Escoceses , y la de eoutciier cl espirita de re- 
lielion de qne publicamente aeuaai ioalrknde- 
flet libres. Un dipatado ptde y por k vigeaúna 



.Tes j, la emancipacloii de la Hapjii y y la liber* 
tad de 811 cuito i però , todo esto no es ma» 
que Ull juego de la política ^ que, qniere tiacer 
aiardc de la filosofia ; es una escena filantró- 
.pica que se representa en aquel momento j j 
que se termina , difirieudo el asunto para otra 
.ocasiun , conto estaiia ya premeditado* He aqui 
la influencia del g^obierno * 

Yo no hablo de los filósofos sabios^ de lo» 
poüticos profnndos^ de los propietarios ilustr»» 
dos 5. y de los ainígos generosos de la llbertad^ 
que la Inglaterra posee en sa misnuo seno. Y0 
lòs estimo^ y les tributo el bonor debido: S09 
liombrcs y ciudadanos que uierecen . el ^precic^ 
^eoeraL Solo bablo de los tiranos y esclavos 
que encierra estaisla cèlebre • . . 

Penetrad basta el finbihete sombrío.de so corte 
yeual y corruptora \ y vereis-que el Genio de 
las compeusacíçmes escríbe en sos decantadas mi- 
uutas : conquista ; invasion ^ jíntillas f Méxieof 
CeiL•nf Cabo de Baetia'L•speranzMj; JUiítta^ Ceu* 
taf islas JonicaSj comercio universal^ Colo^ 
nias exclusivas en ambas índiasj Manila^ y 
Sobenmia absoluta sobre todos los mares* Mas 
adcntro , eocontrarcU al liijo del rencoroso G/ia/* 
ham^ con la cabeza apoyada sobre la luauo iz^- 

* Weismister , el temph de Iob dHiberaeiones Brhà'^ 
nicns\ domicilia tres distiDios (lodercs, stemprc enemigo» 
de ta [laz y anitgos de la gueira ; azotcs formídabUs de 
ia virtiiit I y siemprc amparos y tutores nsitos del deliiOi 
j de uii rey disoluto , cruel y saoguiDario. 

£1 Traductor. . 



quierda, y extenAeodoj eon h derécha, d eél• 
eoto de los crimeoe» qaé es preciso cometer y 
pagar , é fio de atízar la guerra civil en el Fen- 
dee f sacrificar 4 los marineros Franceses en Qui^ 
beron; exifar motinesen París; dirigir asesina- 
tos en el Medh-dia de la Fratfcia, y traicio- 
nes en las costas de Oestt^ ganar proscripció* 
nes en las TuUerías ; y hacer nso del Teneno y 
para destruir fos estades mayores de todos los 
exércitos franceses.. Formad ahora concepto del 

Jqbíémo Britanico , y dè las méximas por don« 
e dirige constanteniente su conducta. La na- 
cion abatida y encadenada gime 9 y le obedece s 
él se complacè en el despotismp^ y en elltor* 
ror de sus maldades ; y no cesa de escogitar me- 
dios para aumentarlas y extenderlas^ cada ves 
m»p sobre ta hx del globo# 

' CAPITULO SO, 

Ma4minaei0nes y críménes prefundos del 
gòoiema Bríiànieo contra la^ Europa. 

La Europa domina i las otras tres partés del 
mundo \ y el gobierno Britanico ba emprendido 
dominaria^ para tekiér el cetro dé la monarquia 
universal. 

La Europa , con su numerosa poblacion , y sus 
recursos naturalès y sólidos, amenazaa las islas 
Britanicas, desdeel momento en que Hegtíe à des* 
pertar ; y el gobierno Britanico ha querido prevé* 
nir este golpc , dominando y destruyendo con là 






90T 

|pD4^a y el bambre, las diVcnwi poblaciMes de J 
. contineiile l^uropeo» 

l^a Europa ha estado continiiaaiettte eïpiieata 
4 invasloiies totalcs 9 y ai torreote de loa poebles• 
barbaroa que ari^oja, sobre ella, elanelo ingrato 

Í estèril del Norte: mas; el gfobierno BrUinico 
a sometido y encadenado à las miamas «aeiones 
populosas y guérreras del Norte y con el talismaa 
de aus snbsidioç 9 y eon el . de soft alianzas y tca* 
tados de comercio. 

La Europa , separada de las ofras partes de In 
tierra, por fragosos y dilatades desierlos, por 
las opiniones religiosas 9 y por los mares , do pue- 
de faeiliHeiile reparar Uís pérdidas sueesivas de so 
jioblacion^ y el çobierno Britanico atisa de eofitt- 
npo 9 en mcdio de ella» , el fue||0 de la goern^; a-« 
lüpenta la discòrdia y lasfacciopes eivileè; fomcn» 
ta las revoluçionea 9 las propaga 9 y laa iiirita 9 
llerando de . up lado é otro los iDStmmeiitos' im 
1^ destruceion, y el geiiio- iaSernai de la pen^ 
fidia y de la mortandad. 

. La Europa 9 sola, es la que pnede libertar al 
Àsia del yugo tiranico y ajbomanable del gobier* 
Ao Britanico < mas 9 este gobterno qne lo pre* 
▼ee, redobla su empe&o. obstinado deoprimir^ 
y senorear a la Eqropa misma 9 para conservar sua 
opulealas coDrjttistasj'y tenerelmundo eoteroy 
l)axo ^u indepejideiicia y, servidumbre» Este pro? 
yeeto sé le ha frostado y entre las nacionés con* 
tineotales de la- Europa; la Francia ha eonse* 
P^uido arrojarle de toda ella 9 y eonfinarle en so 
isla^ y sobre el abismo de los marea.* però icar 



>0» 

té gpobiéPiio obsíequiado , y siempre aítaoero j te-» 
roz, dirige bu vista al Àsia y a la America; 
traïa de indemnizarse en estàs regiones desg^- 
eiadas; y eruza todavia, cou sus destructoras 
Daves al rededor de la Europa* Sa freucsí es 
extremado 9 y no cesaré jamàs , si no en ei mo* 
mento apeteeido^e su destruccion y rninaé 

CAPITULO 21. 

Ojeaia sobre las úoàUsiones , iramadaspor d 
gobuemo Britameo , eotttra la Frat^eia. 

' NIog«na eoaliston se asemeja tanto é la de 
Pilniíz , eomo la de Augsbaarg. Se podria de- 
cir , que el fin de cada sig^lo esta destinado a 
nn compló de reyes contra la naeion Francesa* 
Se liàtt pretextado siempre las nismas cansass 
se ha tornado siempre por tema ^ el equilibria 
entre las potenciaa de la Enropa: y en el foodo^ 
han obrado siempre tambien los mismos prífi* 
ctpios y motirosj a saber, la envidia insupera* 
ble que la Inçlaterra y la casa de Anstria ha* 
bian concebido contra la prosperidad y esplen- 
dor de la Franeia^ Los proyeetos han aido siem* 
pre lo» mismos j aniqojJar à la naeion Fran- 
cesa , y partir sn territorio entre los reyes coa- 
liçados. Los medios han sido tambien ignaies; 
eaer é vn tiempo, y por todas partes^ sobre 
las fronteras del suelo Francés ; invadir todoa 
sus dominios y posesíones; y dividir amigable^ 
mento t^n ricos tfespoíos. Tampoco k taeticn 



209 
ha yariado : negociaciones arlifiçiosas y nulas j 
proposicioaes ilusorias ; traiciones efectlvasf in- 
Tasiones emprendidas con el mayor empeno ; y 
todo g^éoero de atrocidades miliUures. La calum- 
nia se lia dcsplegado tambien con la mísma im- 
pudente sofistería ; los escritores y publicistas^ 
asalariados por la Jnglaterra, no cesaroa de atri- 
buir h la Francia los proyectos mas vastos de 
ambicion , los Iiorrores de la guerra^ y la cala* 
midad general de la Europa. 

La diplomàcia ha seguido el mismo tono j 
acusar à la politica del gobierno Francés, y 
atribuir las consecuencias desgraciadas de la gner* 
ra à su empeno por la dominacion universal. 

Los actores de la coalision han sido siempre 
los mismos^ la Inglaterra, la Holanda, la casa de 
Anstria, y el Imperio. El gobierno Britànico des- 
plego el mismo encamizamiento , y los wismos 
circulos tortuosos deia ambiciòn, en Augsbóurg 
y en PilnÜZ0 

La Francia se armo contra la coalision de Au- 
gsbourg,en.l688jy contra la de Pilnitz, en 
1795. En el siglo ultimo, un rey * osó penetraren 
los antiguos limites de la Francia: ella qnehranta 
sn audàcia; le arroja de su hermoso snelo; y extl* 
ende su imperio, recobrando los linderos prí* 
mitivos de las GaliaSy y los del imperio de CüT^ 
lo•Magno» 

El gobierno Britanico se enfurece , y se im- 
pacienta : trama de nuevo en el Nprtç y w e] 

• Federico Guillenno i*% Rey dc ?pmi^ 

14 



210 

Bledio-diat «gita a la Eoropa por ènatM re- 
cés mas cootra laFrancIa; y elne«oE fraucbs 
-é la freote de aus legiones victortosas , diaipa 
la obra infame de los mmistros Brítwtieos; lí- 
Iierta à la Europa de sa influxo , y de sa pon- 
zonoza perfidia; y levanta su biraso formicuible 
para abatir i los nionsti*uos de Ajb'ion, y para 
irengar en sa exteriniuio la eausa santa de laba- 
manidad* £n el siglo decimo septimo, an rey 
victorioso Iiizo sacrificíos à reyes veneldos^ y 
aelnalmente el geulo poderoso de la Francia, 
en medio de sus triunfos, y de su glòria in- 
comparable y ofrcce condiciones moderadas y tra- 
t^dos generosos , para comprar la tranuuiiidad 
pública de la Europa, y el bien general de to- 
dos los pueblos. Si no sc' le atleiide , el rayo 
està en sus manos; y el sabrà precipitai.*lo sobre fat 
cabesa de los malvados* 

CAPITULO 22. 

jDe ta opresion ge.ieral• 

. Sb' creerta qoe acabo de delinear , en los 1»- 
bros anteriorcs, un sistema imaginario de po- 
litica^ y nn plan fantàstlco de tirania, imposi- 
Ue ^ea ' la execucton. Estc es , sin embargo , el 
sistema de un gobierno de barbaròs y piratas» 
apCeado é una nueteu de filosofos y comerci- 
antes} este es . el sistema de . un gobierno que, 
como acabo de probarlo, sc ba excluido del de- 
recbo dé Im naturalesa,: y ba puesto todas las 



911 

debia u^er xa opuesíion oezvehxl• 

£1 jíiuostruo de la avarícia ]rQro;E del gol^ler- 
tio BrItauiçOy se pi'e3epló en el cQ^sejo de 5afi- Ja- 
mes^ vciiia acoiO|iaaado de las sombras.sliiiea• 
tras de Bedfordj de CronnweUy de ChaihauY 
de X^Ul• Uu jjklapa-tiiuudi estaba abicrto delan- 
te i|e .)p^ u^inUtros ; He allí, les dixp , la ex- 
tenclfin de miiaipcríp.} be aqui las.inàxlmas de 
ml poUt'ica. 

« La Itàlia no eitendera mas sn comercio 
ja tan IluiÀtado ; la Espaaa no mejorarà el su* 
yo y ya tan (|ebílita4o '\ 

(c La Hulanda serà despojada de la pesca ^ 
<|iie la hacc miiy poderosa. £1 Portugal serà 
cu]tiva(|o |)ara ml solo '*• 

«( La llioamarca y la Snecia se limitaran à 
su coiacccÍQ interior. El Bàltico serà guardado 
por la .Uusia à mi provecho; y el puebló Ruso 
no serà si uo mi mariuero axiliar, d mi factor 
^omerciante ^\ 

« £1 Àustria no se acercarà jamas al Océano} 
y la Prusia se vera siempre distraida por gner- 
ras continentaleS) y snbsidios Briténicos ^\ 

(( La Polònia que podria, con el tiempo, figurar 
en el Baltico y en e] Atar-Negro, y ser dentro de 

Socos anos eu el Nortc^ lo que la Francia es en el 
l^dio-dia, dcsaparecera del coadro de las na- 
cioues. Auu la Tartària serà mi auxiliar secreto en 
laparte.mas remota del Àsia, basta que estén 
{«>rjadas lars cadcnas del Af edio-dla , y que mis ali- 
aozas militares del Alortc estén consolidadas"* 

J 



212 

« En la expeietacion de esta grande rerola- 
dion qae yo organizo sordamente, mís ipanifac- 
turas y mis companias de comercio me aseguran 
las minas del BrasiL Mis complotes me daran 
la entera posesion de Mègico y Perúy de que 
me bacen gozar , de antemano , mis tratados y 
mis escuadras. Mis chuclierías me asegnran los 
escalpelos de los salvages de la America Sep* 
tcntrional contra los Amerícanos. Mis intri];as 
me bacen monopolizar el comercio de los Es« 
tados-Unidos , y dirigir su politica incierta/' 

(( Yo estoy en posesion de la navegacion del 
MisbipI; à mi solo pertenecen las peleterías del 
Canadà, el comercio de la Acadia y de Hudson. 
Yo ocupo todas las pesquerías de Tierra-Nueva^ 

Çra formar grandes rentas y nnmerosos marinos. 
o extiendo W poder^ hasta los yclos de Crroeit- 
land y como sobre las aguas de Arcàngel. ^^ 

£1 Àfrica Occidental no conoce si no mis agen^ 
tes , ni mas pabelion que el mio ; yo trtteco^ 
casi exclusivanieute , tribus de hombres , por 
vidriós y cucbillos. Yo be formado , baxo nna 
aparienciade filantropia ^cstablccimientosmercan- 
tilcs en SierrorLeona y Bulama. Yo no bice 
si no acercarme, con mas segnridad, é las Gana:- 
rias y al Cabo-Verde para anadirlos à mi imperio^. 
cuando llcgue el tiempo.*' 

(( £1 Àfrica Septentrional me provee de cor* 
sarios para ayudar mi tirania; y si yo abrigo en 
GibraUar y Ceuta los piratas Marrnecbs^ elloa 
me serviren para poner los estorbos ó peligroa 
que intento al comercio de las otras naciones/*. 



215 

u To domino al Àsia ; el ladostan no abre sua 
tesoros si no a mi j el Mogol no conoee en bus 
provincias mas Europeo que yo } los mares det 
Sor no son surcados si no por mis buqaes^\ 

«Desde el Cabo de Baena-Espcranza , domi- 
no las idas de Francia y de la Beunion; las pro- 
ducciones y los puertos de Ceilan son mios , y 
me asegnran el imperio exelusivo del golfo del 
Bengal. Allí y yo ineienso à los Nabas con una 
mano , y deguello sus pueblos con la otra j allí , 
todas las Artés del Asia f lorecen , y me pagan 
por tributos todos los prodúctos de sn indas« 
tria. Una companía Britànica , una giiarnicion 
y un gobernador y me responden de estos ricos 
paises'\ ' 

(( Tal es mi dominacion dobi^ los continen- 
tes; mi marina insular y comercial losabraza^ 
los rodea por todas partes , mientras que mi po- 
lítica vigilante vela sobre ellos , los oprlme y los 
çontiene'\ 

« Mi imperio sobre los mares aun es mejor 
combinado , mejor consolidado. Mi navegacion, 
la mas extendida que esústió jamas , àbarca am- 
bos hemisferios. No hay una ísla, no hay un 
cabo y no héy parte del globo que escape à sus 

Ïrogresos, à sus dcscubiertas ^ é su- dominacion. 
!s una cadena marítima que fixada por una ex* 
tremidad al Polo Antartico y y conuada la otra 
é la Sociedad de descubrimientos , se extiende 
basta el Polo Austral , para someterme nuevos 
continentes con la Nueva Guinea y la Naeva 



21 4 

Holanda^ y las islas del Mar del Snr'\ ' 

« La Alar del Ja{K>n casi no es coiioGÍda si no 
de niia naves , y yo sulo , presento <:nibaxadore9 
k là Cbioa soüpleaz y ze1osa^\ 

(( Con c) Uempo mi iiavcg^acion franqíiieando ei 
èstfeclio de Magallànc^, rodeando la Arncriea Es- 
paiiolà por cl golfo de Sléxico y la niaf de Pa- 
na'ma , me liarÀ scoor de las riquezas de aqucllos 
oputentos paises^* • 

(( Por mi posieion de la Trluldad y de la FIo^- 
rida y prohibiré a la Dinafmarca y la Suècia el pe- 
netrar en estesoberbio {folfo^ dcstinado i ser mi 
bropiedad exelusiTa. Üuos eolonoè traïdores k 
sn pàtria 9 asustados de la libe^tad de los negpros, 
me Tcnderaii Santo Doming-o , la Guadalupe y 
Blartiniea. Cuba y Pnerto-Rico f]ue yo snjetaré, 
por medio delLambre, cederiln ifiàs facilipente í 
mi poder ^ y el objeto mas g^rande de mi ambl- 
bion seré cnmplido. ** 

«Mas tarde, puede ser, mi naTegpacion, nnien* 
dose i la de Rusia , mi natural y cíega aliada , 
me hara gozar del Mar Neg^ro y del Mar Cas* 
pio y y encontrar un nuevo pasO ha eia los rieos 

Ïsises del Àsia , para darme una influencia mas 
ecidída en el Mediterraneo. ^* 

*\ Que yasto campo & los penncrsos de8tgniÒ8,jr í la 
feroç y ambiciosa avarícia del çobSrrpo Britdiíico! El defv> 
cobre Duevos paíves^ on el lostinto j los pro^ectoi del 
Ladron , que acscubre un tesoro^ ó una casa sin defensà. 
El quema, roba, y asesina; y vnelye cargado de detpo-» 
jos, y cubierto de cr^menes y de sangre.... 

iPerezca, pues^ el gobierno Briténf co 1 

£1 Traductor. 

\ 



1119 

ic El mando perleneee 4 qaita ote latealMP 
sn conquista; elfnela presa de Alexattdro, j 
la propiedad de los Romanos. Aon los bérbaroa 
U^faroa à apropiarselo; ^llos qo tenian^ai no 
hierro y soldados ; sa imperío no podia durar* 
Vo tenj^o oro y marmeros j una marina^ una poli* 
fica, nna poaicion insular, la bruxnla, y qn gó» 
biemo que tiene en su favor todas las preocupa- 
ciones de la Europa. Con estos medios ig^nd- 
rados de los Antig^uos , jamas podran horrarse 
laa grandes lineas de dominacion que he^traza- 
do. *^ 

I Es este el di^lirio del poder , ó los desvaries 
de la ambicion Briténica que mi imaginacion 
asombrada ba exag^rado , en este papel? Mirad 

Sues al rededor de vosotras , naciones del mun- 
o j ved lo que el gobierno Britiuiico ba becho , 
en las orilias asoladas del Bhiny en las pkyas 
dé Quiberonj etí las beladas cimas de los-ifipe^, 
de los Vosges y Pirineos ^ en los tristes carn- 
pos de batalla de la Alemania , en los terribles 
combatés de la Itàlia^ en las llanuras ensangren» 
tadas de la Bèlgica ^ de la Holanda , y en ei es^ 
clavisado Porlifjfol, y la desgraciada Espana^ 
que no preseutan , à la vista borroruada , ai no 
Ittto , sangre , rninas y cadaveres. Gonsideiad las 
traiciones que ha producido, en Fronda j nn 
las costaa del Occidenie ; asesinalos en los de- 
partamentos del Media•^Ua , deatraeeiones en 
los vastos cimenterios del Vondee , y cahmida- 
des en toda la Etüropa^ Penaad que de este mo- 



do ha obmdo eà todo el Universo y y declarad 
yoa y en fia , contra este infame g^obierno que 
el mando entero no ha podido aun saciar de cri- 
menes, de sangre, y aeriqoezasj degnerras, 
de sedlciones , y de poder» El ha excedido , en 
maldades y delitós, todos los feroecs conquista- 
dores^ todos los déspotas ambiciosos, todos esos 
verdagos de la espècie humana. El ha mereci- 
do, inil veces, snsuerte; ] perezca pues él, y 
el mundo es feliz ! 

Los Romanos fneron tan poderosos , y tan or- 
gullosos Gorao los Britànos. Se hacian llamar los 
aenorea del .mundo. ^ y donde estdn? 

Ellos foeron mas bravos, mas belicosos, me* 
jores politicos que los Britúnos. EUos oprimian 
la ticira. ^Que fama han dexado? 

EUos hicieron toda la nave{]^acion y todo el co* 
merciodesu siglo , despues de habcr destruido 
8QS Gompetídores. Ellos preparaban sn caida por 
el laxo y las riqnezas que les prodnxo el mar* 
I Que suerte vergonzosa les foc reservada/ 

Elgobíeroo Britànico dehe instruirse, en Ro- 
ma, del destino inevitable de los opresores de la 
tíerra. El dehe ver en la hiptoria de Cartago , el 
jnsto castigo de los tiranos de la mar. * ■ 

ÍPero que dehe decir el amigo de la hnmani^ 
, al ver el cnadro horroroso de los crímeues 
del gobiemo Briténieo? Ah I sin dada , al primer 

TliOS Britinos son conquistadores por avarícia , y^ por 
orgullo. Se ilaman los Soperanos de tíerra y de mar; ellos 
'po son tnas que sus usurpadores y piratas. 

El Traductoiv 



217 

àspecto proQoii«:Iarà qne la navegacion es el aia- 
yor azote del mnndo. 

IVinguna invencjon lia Iiccho la opresion tan 

CroBta y ni tan univertfaL La pólvora ha héchp 
s guerra» mas cortas y menos sang^ríentas ^ la 
naveg^cion ha hecho la tirania mas impune y mas 
atroz. 

La natnraleza ha hecho todo , para qne el bon»* 
bre fuese libre ; le ha dado una cabeza para or- 
ffanizar el estado social , un corazon para sentir la 
libertad , brazos para derribar el despotismo ^ j . 
piedras para destruir los tiranos. 

La nevegàcion ha hecho todo, para qne el 
hombre fuese esciavo. Ella le ha dado riqnezaa 
para corromperie y itaTcs para encadenar las na* 
«íones y comercio para introducír a todas partea 
del mnndo 9 los tícíos, los z^elos^ los críme* 
nes y la esclavitud. Ciertamente , no es un bien» 
hechor de I9 humanidad, el que construyó el 
{irimer baiLch De este modo ^ el g^obicrno Bri* 
taníco hace arrepentir al hombre de su ingenio ^ 
tt las sociedades politicas de sus trabajos , y la 
natnraleza de sus beneficiós, trasformandolos 
én instrnmenios de desgracia y de guerra* 

CAPITULO 23- 

Cotielusion del capüulo precèderUe» 

El gobicrno Britanico trafica çomo conquista- 
dor, navega como pirata, coloniza como dèspo- 
ta, trata como mercader, administra como tira* 
110, negocia como senor. , 



«8 

Cono p«)teiicia aipncaltora , él ««teriliza , 6 
mata de liambre las otraa oaciones , para pro¥«« 
eriàs solo j ò esclavizarlas. 

domo putencia inaaifactiirera , se introdvee 
€n todaa parles eoii la guerra j Yj^^ todas par* 
les , monopoliza coa . el comereio. 

Cloino potencia colonial , ha federalizado el 
globo, ambiciona el goce exclosivo de aínbos 
kemisferios , y despoja i los estados de sos eolo- 
fiias , i todos los gobiernos de sus riquezas y i 
todos los paises de sns maaifacturas , à todas laa 
regiones de su poblacion. 

Oomo potencia marítima, tiraniza todos los 
^ mares > y no quiere sufrir otra navegacioii que la 
iuya. 

Gomo potencia |iecamaria t encierra en sa is- 
la todos los tesoros , todas las mercaderias , todas 
las foerzas, todas las relaciones. 

Por sa sistema politico, engaSa, soboraa^ 
corrompé I insulta, ó senorea todos los gabi- 
netes. 

Por su sistema legpislativo , trata bostilmente 
todos 1<A pueblos. 

Por su sistema de aduanas , aniquila la indos* 
trí de todos las naciones. 

Por su sistema de ambiclon , el quiere , como 
el Papa 9 dar reyesü todos los pueblos, y no 
dexar organizar la libertad y la república, en 
niuguna parte. 

Por su deso^dida araricia , abriga en su seno 
nu vasto plan de tirania en todos los marea, 
un aistema preraeditadò de invasion de todas 



b« coIrniiM, y nna trama profiintla, ordida 
ticnipo Iia , que àmeiwza' la eoïi^lHacion de Itf 
lie|)iibKca ;>^encral de hi Europa', »b reposo ^ 
att comercio, su indit^tria, sifs devcclios, amí 
líberfades , todo , Iiafttat su iiidependiencia ^ au 
aegnridad , su civilizsrcioir. 

Ha 8Ído tVecosaria tV^da là embriag^eíeil• del p(K 
der, y toda la locuf'à del dcapotisnio, para o»9í¥ 
ereer que semcjante estado , de cesas pttdiese du-' 
rar. Noliay maa ai no advertir à laa nacione^ 
de Europa y de la Amctica , de 8us ycrdaderoa 
dereclios, y sos mas preciosos ititereses^ par» 
reunirlas contra udoa tiràooa Üm inaeiiaatoa y 
fan execrables* 

CAPITULO 24. 

Consideraeian sobre las consecutncias y maleé 
horrorosos que prodüce el Gobiemo BritànUo» 

Es ona verdad tan clerta como funesta!, que 
las guerras del Continente , necesarias k la ex- 
istència y à los Interescs del poder mAritimo in-* 
salar, minan, y hacen caer los mas bellos ci- 
mientos de la Ubertàd política de las iiaciones^ 
y por una justa coosecuencia de los sucesos bu- 
manos, acaban dcstriiyendo la libertad civil , 
las rcntas , y los recursos del mismo poder ma» 
ritimo. El estado actual de laaislas Itritaoícaa 
ofrece un testimonio conviàcente de esta ver- 
dad , à mas de los que kioa hace ver ^ èa todoé 
tiempoa^ lalustoría* 



EI gobierno Britiòico blasona de ser el únU 
co , en el mnndo , que manda à pn piieblo li- 
brej y en medio de este orgullo, no cesa de 
perseguir , por todas partes^ las ideas liberalesy 
y al espirlttt republlcano» La monarquia eoDS« 
titncional de los Britanos ha Tenido à ser, la^ 
mas absoluta y la mas opresora t ella no eon- 
serva el nombre de llbertad , si no en una es- 
tèril y vana teoria; y en pomposos y fementidos 
discursos : lisonjea y seduee al pneblo con espe«* 
ciosas exterioridades ^ al mismo tiempo que re- 
macha , de mas en mas, sus pesadas y ver* 
gonzosas cadenas. Ni ^ como seria posible , que 
un gobierno, que en fuerza de sn política y^ 
de su inalterable sistema y produce y slembra el 
despotlsmo sobre toda la faz del globo, pudie- 
se recogcr yesparcir, en sn pats, otros frutós 
que los del despotismo ? El goblerno Britanico 
conduirà sn carrera política por el mas Iiorri» 
ble de todos los crímenes ^ y la mas atroz de 
todas las traiciones : él aspira é destruir la li- 
bertad de las naciones 9 y à extlnguir y disipar 
enteramente la de su mísmo país. 

No puedo separar la imaginacion de los hor« 
rores con que este gobíerno insídioso y pérfido, 
conspiro en Pilnitz^ en Padua^ en Pctersburgh. 
Solamente , al gobíerno monstruoso de un pne- 
blo insular, podia ocurrir el proyecto impio de 
rayar Àla Francia de la Usta de las potencias 
Europeas. La coalísion de doce rcycs que con« 
diucian veitUi-dos pueblos a la guerra , no podia 



2ít 

ser obra, 8Í no de un gobierno contra nata* 
ralcza. * 

^ De que afitacia y poderosas intrig^s , no ba 
fildo preciso yalerse en las cortès de Europa , i 
fin de seducir à los reyes , y armarlos contra si 
mlsinos , y contra la felicidad de sus pueblos ? 
i Que grandes ríquezas , y cantidades de oro no 
han sido menester ^ para corromper los minis- 

* Es preciso ser tan desnaturallzaclo como el gobierno 
Britanico, para no estremecerse de horror à vista de sus 
crimenes y abominaciones. £1 solo rcynado del san^uinario 
George i7/ofrece, |>or uu calculo nada exagerado, cincuen^ 
ta mülones de yictimas destrozadas por guerras iujustas y 
san^ientas, por cl hierro y el fuego, la hambre y el veuenoy 
la traicioD y el asesinato , en ambos hemisffcrioSj à las òrd&- 
nes de los monstruós antropofagos del gabinete de San 
James. 

Un sistema y profundamente maquiaTético, lleva el azote 
de la tirania Britànica desde el Ecuador basta los Polos,* y 
dcsdo el Oriente, basta el Ocaso : destruir , incendiar y ro« 
bar, be haqui sti objeto ; esclavizar , y poseer exclusivamente, 
he aqui su empeüo; y lo que entra en todos los célculos de 
su infame politica. £1 nombre Francés ò Americano..%i Qus 
temible no es d los oidos de estos monstruós devoradores y 
feroces ! Ellos quisíeron destruir, de un solo golpe, à toda 
la nacion Francesa. En todos los puntos deia tierra, per* 
tiguen de muertcàlosindividuos de esta n acior GBA.iiDBy 
cehe&osa: dirigen contra sos pechos los aleves punales de 
los asesinos ; y no hay genero de maldad y de atentado, que 
no cometan cara exterminarlos. 

Yo he teniilo el honor de atraerme d odio de este çobler* 
' no impio y birbaro : mi amor d la Francia, y mi admiracion 
coustante al Sobbbako ikhortàl que la , gobernaba , han 
furecido crimenes à susojos, y atentò coníra mi vida, Pu- 
lliqué verdades fuertesy luminosas^ contra los horrores de 
su conducta; y su vencanza atroz me ha perseguido en todos 
los puntos del Orbe. Se que este gobierno, humiUado con el 
desprecio y cxecracion universal, ha puesto mi cabezaàpre•^ 
cioj y que SU9 yiles espias; derramactos; comç íegiònefOi^si* 



2SS 
tiHM exirungetiM j y pag;ar sos exércitos , con el 
ftuiu deslgiiio cie coiiiiueu'Ios a ia muerte ? La 
Injrialeiia , sola, podia aspirar à esta iiioustriiu- 
sa empresa y conduiria à satisfaccíou de aus mal- 
vadas ideas. Se necesitaba, al mismo ticuipo, 
de una mariua inuiensa para dominar en los ma- 
res del S.ur y del IVortc, en los piicrtos del Mc• 
.diterraneo , y del golfo lUexicauo , Cabo de 
Bueua*Rsperanza ^ y de Ceilan y Manila : el 
La rcalizado estàs empresas simultaneamente , j 
con toda el rrrojo y rapidez imag^inable* Pero^ 

n<U} sobre toda la tierra , do ban cetado de armarmelazos 
con el empeíio de inmolar mi sangre à su cruel v furibunda 
ràbia. Mnsen vano^ sabed, ▼if es mercenàries, del mait in- 
fame de losgobiernos^ que nunca quedaré amilapado al gri- 

to aterrador, deructiras amenazas Sabed, OmoBstruos, 

que no temo nivúestrasodiosas ven^an^s, ni vuestros aleves 
y eosangrentados punales. 2!>i MUnaJes, despues de Laber 
.àtifenàuio la Grècia, ipurió en lojs blerros: si Tcmistoclcs 
. fue desterrado de su pàtria ,. en recompensa de sus viçtorias, 
y Cicerou, el ornamento de la elocueucia Romana, y el pa- 
dre de la pàtria, fue la victima.de una ingratitud búrbara; 
^Que.puedo yo témer por mi dèbil existència? Feliz, ai, 
Svista de tan sublim«'8 exemplos, pnedo morir, exiialando 
mis úli imos suspiros , i)or la pàtria y la lihertad, .Ueno d^l 
duice consuelode bnoer bourrado à la virtud,;yde nobs^ 
ber faltado jamas a los delieres de un ciudadano Aracrica- 
no. Que toe iniport:i el odÍQ y la saua de los tiranos de 
Lnndr^'s: si cayütido baxo la punta destructora de los asesinos 
pníïsAí'i de süs espias,:y a^ntos asalariados obtengo las se- 
nalre hoorrfisas de la seiwibilidad de Ins virtuosos, y la ve- 
ni'racion de la postrridad ; moriré con placer,con deleyte j 

glòria Mi coucieiicia, ó. bàrbaros! me abroquela; nada, 

me iuiimida. Però 

I Ptre%ca el gohierao Britànic t\ ..<.. 

ïi Traductor. 



SC i^ecesitaba iguabneiite de un mimsterio obse- 
quiado y sin previsiou, qne no escucbase mas qu^ 
la bambrienta y devoradora aiubicion ^ para em- 
preoder L•i execucion de estos vastos designios^ 
y creer qae el fantasma de un g^obierno tan enor- 
me como perfilo, y tan ínsultante eomo one» 
roso à todos los pueblos de U tierra y pudiesi^ 
existir larg^o tlempo. 

Alo se eucueiitra j en la bistoria de las nació- 
nesy otro excmplo ta^ asombrosode prepa^ati* 
vos combinados para ta opresion y esclavitud uni* 
versal , como los que aprontó el gobieroo Bvi- 
tanico contra la F rància desde elano de 1793t 
preparativos dirigidos por el calcula frio de la 
ati*ocidad^ impoiiticameute multipiicados por un 
orgullo estupido y feroz: ellos ban rfsfluido soi* 
lamcnte en descdacion y ruíua del puebio Bri» 
tauico. Tampoco se baiia y en la bistoria de In^ 
glaterra , otra època tan vergonzosa como la del 
abandono de todus siis aliados j * ni tan funesta j 
bbmillaute ptfra ella misma, como la que le bd 
visto excluida y arrojada de todos .. los puerto» 
de la Europa. 

£n fui: ^ Cinil es actualmente el estado (!3 
la Inglaterra y el de la Escòcia , y el de Irlaoi» 
da y que formau el impcrio de los tiranos de Lon- 
dres ? La una està oprimida, baxo el peso dcs^ 
tructor de sus riquezas coioniales , y de sus h:>rw 
rorcs poütic«)s: la. otra gimc. indignada, y es;n^ 
rael momeni^feUz de dcstrozar.el yugo de bro;ice 

«.Excepte tl oTgro Chrifltoraii epj^ j^Ii *lc $Mito Dottiioga^ 



Ml 

qae la oprime^ y b ultima, banada en la sang^e ino* 
centè de sns mejores clndadanos, no respira ú 
no odio j Tenganza contra el trono de no dèspo- 
ta cruel y antomata , y contra un ministerio tira- 
ho , feroz, y execrable. ^ Qne son , pnes , las 
Ires islas Brltànicas? Una cindadela çaaraèci- 
da de despechados monstruós, sltíada por la justa 
abomínaclon y el furor terrible del unlverso, ame* 
ïiazada por la reaccion de la Europa entera , y 
pròxima a caer baso el rayo yeng^adbr de las le- 
jg^iones francesas. 

^ Donde esta , decid , esa Gran•Brelana tan 
fiera y envanectda por su constitneion , por sns 
leyes, por su marina, porsu comercio, y por 
sa libertad civil ? Yo no veo mas que una yasta 
y lobreg^a prision donde los amig^os'de la liber* 
tad son proscriptos; donde se pone una mor- 
daza cruel y afrentosa à los gpeneròsos denuncia- 
dores de las actas tiranicas del gobierno; donde 
los escritores püblicos, cuando pronuncian' la 
irerdad, y dcfienden los intcreses sagrados del 
pueblo, son conducidosal pí/ort , y perseg^uidos 
por todo el furor de la calumnia, y de la ràbia 
ministerial. Alb' se ve el caràcter nacional abatido, 
y degradado por el odio y las animosidades del 
partido, qne continnamente fomenta el gobier» 
no t la nacion dividida en faceiones , y flucta- 
ando entre la misèria y la desesperacion : los Es* 
coseses privados de sus derecbosj los Biritinos 
de aus asambleas pnblicas; los ciitdadanos de 
su libertad civil ; fos Irlandeses abandonados al 
furor de ona soldadesca asesina 3 los repreaentaa- 



22S 
tes Tirtnosos del paeblosm la menor lofluc^nçia; 
la mayoFÍa del parlamento slnyirtud; los mlnístros 
sin hiimanjdad , y sin moral; y las pasiones de un 
gobierno tlrinicQ, irritadas de mas eu mas, à pro? 
porclon que se acerca el momento de su exterl 
minio. Es en medio de este caos donde los pri- 
sioneros franceses , mas desgraclados qae si Ln- 
biesen çaido en manos de los salvages, perecea 
de bambre , y son obügpados à comer un nan a- 
masado con cal. j Que horror a los ojos de ks 
nacíòiiçs clvllizadas ! 

Brhàiios; pueblo dig^no de mejar suerte: na- 
cion oprimida y fascinada por tus ministros in- 
moralea y dèspotes ; seducida y deslumbrada por 
la apariencia fastuosa de tu comercio, ^quc ea 
lo que piensas ? Tu crees ser grandcy podero- 
sa , por que tus soberbios baxeles corren sobre 
todos los mares à insultar , con fcrocidad bàrba- 
ra , h todos los paises y à todos los pueblos de 
la tierra. Mides tus riquezas , tu poder , y tu 
felicidad por el numero de las colonias que luur- 
pas y estebleces en los díferentes puntos de nuo 
y otio bemisfcrioí mas jque profundo y terri- 
ble eiieauo! abre los ojos, pueblo avariento y 
calculador : mira el producto de los esfuerzos ▼ 
gaslos enormes de tu jfobiernoí has perdidola 
liberUd pobtica , y adquirido la esckvitud' civU 
dcsde el moinento en que tus gobernantes osaroa 
poncr , en execucion, la liça y conclerto abo- 
miiiabie de Pilnitz. Calcula con exactitud lo qMc. 
desdeesta època, ha defraudado el imbècil Ge^ 
orge III à tos derechosy ^rerogativas j y lo qw 



Me . 

lian disipado tos ministros del fondo de las ri« 
qnezasy menes nacionales, precipitando la cor- 
ropclon y la mnerte sobre todo el snelo Britani- 
co. Examina como se han reag^rarado, dcsde 
1 793, tus ealamldades domesticas , y la opresioa 

pública y particular de tus cindadanos ; Qne 

de bancarrotas , fuiïestas à la existència nacio- 
nal ! J Que de tasas oncrosas , y multi plicados 
impncstos que ag^obian alpucbío, yaceleransa 
ruina ! ; Que de leyes inconstitueionalcs , vio- 
lencias y vexaciones , en todo gpénero , (|ue no 
te dexau ni anu la facultad de sentir tus males, y 
menos la de qnéxarte, que es cl ultimo con- 
'suèlo de los desg;raciados ! Observa , como todns 
las naeiones te echan en cara , la verg^onzosa 
insensibilidad y cobardia , con qne has dexado à 
tus ministros violar impudentemcnte cl dercclio 
natural, y destruir, con tus propias maiios, el 
de gentes , que es el nnico baluarte que podia 
èervir dé proteccion y ampro i tu libertad , a ta 
existència politica, y à la prosperidad proporcionada 
de tu pais* En vano tratarías de ocurrir à esté 
sagrado principio, para salir del céos espantoso 
en qne te han arrojado los déspotas de Londres^ 
81 esta empresa no entrase en los proyectos de 
una nacion grande y geuerosa que dirigia, en 
Europa, el mas *h&bil y poderoso de los po- 
tentados. La feiicidad de la Francia , y la giò* 
ria del hvrob que la presidia , cxigen el cxter* 
minip de los nwnsírtios qne opriraeii la liig'Ià^ 
terra, y qne insuitan al genero humano. De entre 
loa rayoa vengadores de la justícia que truena^ 



! /^ 

/ BOI 



227 

C9 sobre sos cabexas^ Baldrà entonces tu li^ 
rtad^ y la restUucion de tus derechos i y de 
ta bonor , con la de todos los que competen k 
las demas nacioaes* He aqui la mas solida y li- 
Bonjera esperaaza, que puede eoiisolar à los 
boiobres seiisatos y justos \ baso el yugo buini* 
Uaute y cruel del despoüsmo firilanico• 

CAPITULO 23. 

Ht la Vibtriaà de las naeianes. 

El gobiemo Brltaníco es el linico de la Eu- 
ropa que haya conocido de lejos 1^ graiide íoflu* 
eiieia , que la llb%i*tad , conquistada por los Frau* 
ceses I debia exercer sobre su uavegacion ^ su 
BÍstema colouial, y la líbertad de la Europa. 

El lo ba seutido desde 1789, y se ba arre- 
pentido de baber cooperado à ella. El ba querido^ 
apoderarse de ella , despues corromperla | luego 
dísfamarlai y úlümameote aniquilaria» jEsfu- 
erzos vanos.! En vano Burke ha dennnciado la, 
líbertad de la Francia como una coospiracion 
contagiosa , à los Franceses libres como saltea- 
dores é inceudiarios , y à los representantes de un 
pueblo sobcrano eomo facciosos. 

Inutilmente el sanguinario Pitt y sus suceso- 
res ban subsidiado exercites , estipendiado rcycs^ 
asalarlado traidores, y pagado asesinos. fnu- 
tUmente sus seciuices numcrosos, en el parla- 
mento JBritànico , bau acusado la Francia de tur- 
bar el reposo general ^ de atentar à la segurt* 

■ ' 3 



228 

dad de la flnropa, 'de aspirar atdominro oni* 
Teraal/y de carecer de idcas de eivilizacion^ 
y pnDCÍpios de gobierno. 

La Europa dcseDgpaiiada re^pondc à estàs decla- 
inaciones venales, é esta política artificiosa , con 
un grito de indignacion y desprecto universal 
contra el gobicmo Briidnico. Todod los cspiritns 
polítícos estan ya instruidos sobre la atribicíon 
secreta de este gobiemo , que, de an siglo aca^ 
ba cubierto sus usarpaciones con las mismas 
mentiràs , los mi^mos snbsidios , los mismos re* 
snltados contra la líbertad de las naciones y del 
Comercio general. 

El gobierno Britanico ha creldo poder deté* 
ner la marclia magestnosa de fa libertad de los 
pueblos 9 y de los mares : esfaerzo ridiculo de 
pigraeoi contra gigantes. 

No ; todos los déspotas , los reyes, y los ti- 
rxnos del mundo, coalisados con el feroz gobierno 
Britanico , no son mas potentes para oponerse ^ 
en lo futuro, al cstabtecimiento y a los progre- 
80S de la libertad en Francia , y en el Nuevo 
Mnndo, como lo son para oponerse al curso 
del sol ) y k los progresos de su luz , dcsde que 
8e eleva basta su Ocaso« 

2 Libertad ! ; Libertad ! Este es el primer 
grito del nino desde la cuna , esta es la pasion 
mas faerte del bombre , este es el ultimo snspi- 
ro del anciano, este es el derecho de la espècie 

liumana. 

' La libertad es el primero de todos los derechos* 
EI Autor del Mondo la ba impreso en todo lo què 



229 
ücxiste , en los individoos como en las sociedades* 

La libertad es ei dcrecbo natural del Iionibre 
eomo de las naciooes. Prívarlos de ella , es ua 
crirnen de Lesa Nato^aleza , de Lesa Humà- 
MiDAD. Prohibiries su goce , cnando ellas la ban 
adfjiiirido, ó que ellas la recupcran , es una lucu* 
ra atroz que no ba podido nacer si no en el cere- 
bro del tirano de Londres , ó mantencrse si no en 
el espirilu de sns bàrbaros miuisiros. 

La libertad no es solamentc nua pasiop , es ui| 
sentimiento poderoso y delicioso. Un buen ciu- 
cladano le sacrifica todo, aun los sentlmientos mas 
caros al corazon del bombre. BnvTO le inmoU 
fiu hijo •j Decio , le àà sa vida ^ ngmerosas lesio- 
nes pereeen por ella ; por ella , los oradores cèle- 
bres, los homb^es de genio , los graudcs capità- 
nes, los bonibres de eslado, los filòsof os i lustres , 
se ezponen é las proseripciones , à los suplicios, 4 
la moerte. Los amanies de la libertad estan siem- 
pre prontos é saerificarle todo cuanto mas amaa 
sobre la tierra. 

La libertad aun es el resnitado de las luces ; e- 
Ila es del número de los priucipales conocimien- 
tos hnmanos^ si ella es liija de la Naturaleza, 
tambien es piipilo del Arte social. 

La libertad debe 9 pues , a pesar de l'os obstacu- 
los del g'obíerno Britanico, tener el destino de to- 
das las ciencias ; el de crecer y de perfecclouarse. 
- Segun los ^randes efectos que ella ba produci* 
do en Francia y en los Estados-Unidos , y qoe 

Ïrodoce en la America del Sor^ se debe creer que 
iré progresot tan inmensos como rapidos. La 



250 

líbcrtad es el sol polltido que calienfa ^ sosjtíene , 
anima los corazones de k FR ANCIÀ j de la 
AMERICA y perfecciona la espècie httmaiM ^ade- 
lanta el Arte social liacia la felictdad de los piie- 
blos , aumenta los prug^resos de ks cieacias bieiH 
bcchoras y de las Artcd úliies, multiplica los iiiu* 
numentos de la civttizaeion y de ks luces , hace 
eonocer por experiència ks ventajas de la filuso^ 
fia , abre de nnevo y extiende todas ks fnentes de 
los conoeimicètos humauos ^ y de ks verdadcs mo- 
nies. 

La Europa , à quien k filosofia ha dcstinado i 
fnndar la libertad universal , Ycré pronio reunir- 
se Stts diversos Estados , y eonfederarse « para a- 
liatir la tirania maritima que exerce exclusivament 
fe el gobierno Brilanico de un diglo aca ] k ex» 
istcttcia politiea de los pueblos lo exige ; k escl»^ 
Titttd del comercio general debe desaparecer. 

£1 espiritn goberuante y colonial ^ que Lon- 
dres transporta , à medida de su deseo y de su am*. 
liicion^ a todas las par tes de la tierra ^ es un es•• 
piritu de destruceion y no un esjnritu de posesion^ 
es nn espiritn de esekvilud, y no un espirittt 
de comercio j es un espiritn de fiscalidad 
y no un espiritn de indústria ; es un espiritn de 
discòrdia y guerra ^ y no un espiritn de modera- 
cion y filantropia : es menester derribar , ó des-» 
fruir ese duende maligno que Vaga por el mun* 
do; su existència es una cakmidad universal. Cay- 
ga pues y perezca del mismo golpe el gobiemo 
Britinico , para qne k indnstrk y comercio del 
inundo y libres de k avarick de ese moiisiruo p 



^xtieiiden por todàs parles^ y én todtfpMes, rey 
jutràn la abandaiicia, la felicldad 9 y las riquezas* 
! A 2 ^Qnando es qae la palllica Europea po- 
úri formar oa plan completo de libertad y justí- 
cia 9 para sabstitaírio à esta diplomàcia Britànica 
que no es si no astnta , convencional y maquia- 
belica? ^ Quando es que las naelones , situada» 
sobre un mismo coutmente , Formaran sincera- 
«eute un pacto Europeo , para g^ozar de todos su^ 
derechos generales , y sostener , de buena fe , snsi 
intereses particulares ? Quando. ••• Luego qnelod 
ezércttos del país de los bravos bayan mereci« 
do las acciones de gracias , y los elógios del Uni« 
vçrso, por un desembarco feliz en Inglaterra. 

Si estos votos se cuinpliesen un dia y la guerra^ 
cnyos trinnfos ann son horribles calamidades, 
cesària sns dcstrozosj los conquistadores no ten- 
drtan ni oeasion, ni pretextos ^ ni medios. Una 
paz sòlida fundada en el interès de todas las na- 
ciones, las dcicaria respijrar -à h sombra del co* 
mercio, de las artes^ de la agricultura , y de sa- 
bias constitnciones. La ambicioii avara de los go- 
biernos se cambiaría- en emnlacion de prosperldad 
hacia los pneblos. Despues del estableeimicnto 
del gobierno Imperial en Frahcia^ un solo suceso 
notable pucde acelerar esta època feliz para la 
ISnropaj y este, es la caida y ruina del gobieruo 
Britaulco y de au sistema opresor. 

La libertad, apoyada en la iinprenta y en los 
gobiernos de Francia y de la America def Norte 
y del Sar, debe mudar la faz del mnndo y gobcr- 
nar la homanidad entera por el imjierio de la ra- 



25Í 
zoni por la laerza de b josticiíi y por los benefi- 
ciós del ing^enio; mientms qne el dcspotisino Bri* 
tanlco , apoyado en baqnes opresores , debe pe- 
recer por bus propios excesus, castigarse por 
sos propios crimenes, y desaparecer para siempre 
de la tierra delante de la soberaoía de lo& pueblos^ 
y la rcmiloii de los Estados de la Europa. 

FIN. 



INDIGE 

líE LOS LIBROi Y CAPITCtOS QUE CpKTIETTE ESTA OBBl, 



.* 



Paf^iaa. 

Dedicatòria. ....^ 5 

Prefacio. 5 

A todo» lot Pueblos amigos de la libertad. . . 9 

LIBRO PRIMERO. 

DEL PoqER MaRITIMO EN GENERAlé 

Tntroduccion.. . ,\. . .. 41 

.Capitulo 1.° Del poder mariíimo en general. ... 51 

2." del poder mantimo comiiii en general. ... 52 

3 Error funesto de Montcsquicu ........ 55 

4 Del poder maritimo ezclusivo. . « . ... . 5(> 
.5 Rrgla general 58 

6 Kcsultados del poder maritimo ^\>mun 59 

7 Besultados generales del poder maiitimo exclusivo. 63 
à Dif'eh'encia entre el poder maritimo comúii y el 

poder maritimo exclutivo 67 

9 PiferenciJ entre e) poder maritimo de los anti- 

guos, ^ el de esto siglo ....... 71 

10 de las colonias. 72 

11 De uiiu leforma neccsaria 74 

12 Püralclo tie Càrtago y Londres 76 

13 Paralelo entre Venècia y Londres •* S2 



* X