CACAO evidencia que sugiere que antes de la llegada de los españoles también se cultivaba en Sudamérica, principalmente en Perú y Venezuela. El cacao, base del chocolate, es un árbol nativo del trópico americano, especial- mente de Mesoamérlca. Es muy probable que fueran los Olmecas los responsa- bles de su domesticación, hace tres mil años, pero se atribuye a los Mayas la di- fusión de su uso, pues constituyó una parte Importante de sus actividades ^ culturales, como alimento, medicina e Incluso como parte de su sistema económico, como moneda. Los Aztecas o Mexicas integraron sus usos en su cultura. Por otro lado, hay Nisao Ogata EL CACAO Fase de la preparación de una tableta de chocolate fino en Turín, Italia. Fotos: © Fulvio Eccardi E l chocolate, consumido en épo- cas prehispánicas sólo como bebida, se ha transformado en una serie de productos que van desde bebidas que cuestan cin- co pesos, hasta los selectos de la Maison du Chocolat, que en el Rockefeller Center de Nueva York alcanzan 145 dólares por 231 gra- mos de chocolate. Esto represen- ta ganancias anuales de alrededor de 5 mil millones de dólares, de los cuales 90% se queda en los países donde no es posible pro- ducir una sola planta de cacao en condiciones naturales, en Europa y los Estados Unidos. El cacao, que habita la sombra de la selvas lluviosas, requiere de alta precipi- tación, suelos húmedos pero bien drenados y, bajo domesticación, se acompaña de árboles del dosel superior que lo protegen de la luz y que, en el caso de las legumino- sas, fertilizan el suelo. Según René Millón, en su ex- celente trabajo doctoral "cuando el dinero crecía de los árboles", en épocas prehispánicas se cultivaba cacao prácticamente en cualquier sitio que presentara condiciones mínimas para su desarrollo, tesis que comprobamos con el hallazgo de plantas cultivadas en diversos cenotes en el centro de la Penín- sula de Yucatán, en zonas aparen- temente inadecuadas para su de- sarrollo, y en los traspatios de las casas en muchas localidades del sureste de México, donde actual- mente el cacao no representa una actividad agrícola. Las variedades El cacao está clasificado en el gé- nero Theobroma, en la familia Mal- vaceae (antes en la Sterculiaceae) con 22 especies descritas, ubicadas principalmente en Sudamérica y partes de Centroamérica. Las úni- cas especies que se distribuyen na- turalmente hasta México son The- obroma cacao L. y T. bicolor Humb. & Bonpl. En Oaxaca, la segunda se utiliza para preparar una bebi- da conocida como "popo", y en la Amazonia peruana, las semillas se tuestan y se comen como bo- tana. En Brasil y Perú, Theobroma grandiflorum (Willd. Ex Spreng.) K. Schum., se emplea para elaborar bebidas. Mientras que varias cul- turas indígenas del noroeste del Amazonas en Brasil y Colombia, y en los altos del Orinoco en Ve- nezuela, utilizan T. subincanum Mart., junto con especies del gé- nero Virola (Myristicaceae), para preparar un potente alucinógeno en forma de polvo. También, se ha encontrado T. speciosum Willd. en huertos familiares de indígenas Chacobó en Bolivia. De Thebroma cacao L. se han descrito dos subespecies, I cacao ssp. cacao y I cacao ssp. sphaero- carpum, que representan los extre- mos del continuum de su variabi- lidad. Así, la subespecie cacao se distingue porque presenta frutos alargados con surcos pronunciados y semillas blancas, mientras que la subespecie sphaerocarpum presen- ta frutos redondeados con surcos escasamente evidentes y las semi- llas de color púrpura. En términos 2 forastero en Mesoamérica, proba- blemente traída 1 500 años antes por un grupo sudamericano cono- cido como los Valdivia. El cultivo El cacao se cultivó exclusivamente en el continente americano has- ta 1860, cuando comenzó a sem- brarse en África. En México, hacia finales del siglo xix e ¡nido del xx empezó la transformación de las áreas propicias para el cacao con la introducción de la caña de azú- car y del plátano. En la década de 1930, los productores mexicanos decidieron expandir el cultivo de variedades forastero sudamerica- nas, generalmente consideradas de mala calidad, con el argumen- to de que producen mayor canti- dad de granos por fruto que las variedades locales y que además son de rápido crecimiento y resis- tentes a plagas. Con esto, grandes áreas de cultivo de los principales estados productores, Tabasco y Chlapas, fueron Invadidas con es- tas variedades. Ahora, además de la mala ca- lidad, sobresalen entre los proble- mas más evidentes de la produc- Mazorcas de cacao criollo en una plantación cerca de Plchucalco, Chiapas. Frutos de cacao agronómicos, la primera se conoce como la variedad criollo y la segun- da como foraste- ro, mientras que la cruza de ambas es el trinitario. En- tre los extremos existe una notable variabilidad que se manifiesta en la forma de los frutos, el color de las semillas y en que frecuentemen- te no hay correspondencia entre ambos caracteres, todo ello hace que la variedad trinitario sea muy subjetiva. Por ejemplo, es común hallar frutos alargados y de surcos pronunciados que presentan semi- llas púrpuras y frutos redondeados con semillas blancas, incluso pue- den encontrarse los dos colores en el mismo fruto o distintas tonalida- des que van desde el blanco hasta el púrpura. En términos de calidad, para producir los chocolates más sabrosos y caros suelen preferirse las semillas blancas y frutos que tiendan hacia una forma alargada y de surcos pronunciados; es de- cir, los que se acercan al extremo de la subespecie cacao o variedad criollo. No obstante, por su mayor resistencia a plagas y enfermeda- des, actualmente se cultivan más los Individuos cercanos de la sub- especle sphaerocarpum o variedad forastero. En México, el cacao domestica- do desde épocas prehispánicas era de tendencia chollo, aunque algu- nos documentos de la época en la que llegaron de los españoles su- gieren la existencia de la variedad 3 Tostado doméstico dón de cacao en nuestro país: el del cacao en un abandono de plantaciones en gran poblado del . , , . . . Soconusco, Chiapas. P arte de las zonas P rodüCtoras de Tabasco y Chiapas, los bajos pre- cios por la cosecha, la ausencia de un valor agregado que permita ob- tener ganancias adicionales a los campesinos, así como el desconoci- miento y las desventajas para com- petir en el mercado internacional. La migración de jóvenes ha- cia las grandes ciudades y hacia los Estados Unidos es el principal factor del abandono de las planta- ciones. En el pasado ciclo, en va- rias zonas de Tabasco fue común observar que la edad de la mayor parte de las personas relacionadas con la cosecha de cacao oscilaba alrededor de los 50 años. Aparen- temente, es reciente el incremen- to del desarraigo entre los jóve- nes, quienes no ven expectativas de progreso mediante el cultivo de cacao. Paradójicamente, esto propi- ció la producción de cacao orgáni- co, porque el uso de plaguicidas u otro químico ya que no era reditua- ble. Así, en muchas de las fincas sin atención, la cosecha se sostenía con los frutos sobrevivían como resulta- do de la selección natural. El mercado A pesar de que en el ciclo pasado el precio del kilo de cacao en fres- co osciló entre 5.50 y 6 pesos, y el de la semilla en seco estuvo entre 13.75 y 15 pesos por kilo, muchos campesinos prefieren vender la se- milla en fresco para obtener cual- quier cantidad de dinero. Por su parte, las cooperativas o empresas acopiadoras del cacao seco, en tér- minos generales no realizan una selección de granos y mezclan las semillas sin Importar la variedad o procedencia de las plantas. Ade- más, no establecen estándares rela- tivos a los tiempos de fermentación y secado, de allí los lotes de semillas sobre-fermentadas o no lo suficien- temente fermentadas, así como las semillas con distintos grados de se- cado. El resultado es la producción de cacao seco "a granel" para uti- lizarse en la elaboración de choco- late que no requiere estándares de calidad elevados. Por ello, para atenuar las des- ventajas y competir Internacional- mente no sólo es necesario produ- cir, por ejemplo, cacao orgánico, sino cacao seleccionado bajo cier- tos estándares de calidad, lo que proporcionaría un valor agregado a la cosecha. Actualmente hay em- presas transnacionales interesadas en producir chocolate de semillas de cacao con características simi- lares. En Tabasco y Chiapas, aún existen plantaciones con cacaos de calidad que podrían seleccionarse para que, a través de un estricto y controlado proceso de fermen- tación y secado, produzca una se- milla con un aroma y sabor deter- minado. Este procedimiento es el principal responsable del éxito de la empresa italiana Domori, los pri- meros en recuperar el cacao crio- llo, brindando así gran importancia a este tipo de material genético, y en considerar la calidad de la post- cosecha como elemento clave para elaborar chocolate fino. Ellos selec- cionaron plantaciones específicas de cacao venezolano y, mediante la estandarización de los tiempos de fermentación y de secado, pu- sieron en el mercado Internacional una variedad de chocolate muy cotizado, una barra de 75 gramos cuesta alrededor de cuatro euros (5.2 dólares). Por otro lado, la falta de incen- tivos para la producción de choco- lates de calidad en México explica buena parte del porqué las mayores ganancias se quedan en Europa y los Estados Unidos. Un considera- ble volumen del chocolate que se produce en el país, descontando el de las empresas transnacionales, se elabora moliendo cacao y azú- car en partes iguales con molinos como los que se utilizan regular- mente para moler el maíz. De este procedimiento resulta un chocolate con poca aceptación, sobre todo si 4 se compara con los elaborados en Europa y los Estados Unidos. Las alternativas Afortunadamente, todavía hay po- blaciones de cacao de alta calidad en el país para producir chocolates competitivos. El inifap ha realizado un gran esfuerzo para el rescate de los cacaos mexicanos y el de- sarrollo de variedades resistentes. Sin embargo, es necesario exten- der este esfuerzo hada todos los estados que presentan condiciones adecuadas, como Veracruz, Oaxa- ca, Guerrero, Michoacán y Puebla. El cultivo de cacao representa una magnífica oportunidad para implementar alternativas de de- sarrollo en el trópico. Cuando se hace utilizando varias especies de árboles de sombra, las plantacio- nes pueden albergar altos nive- les de diversidad biológica, so- bre todo si se compara con otros cultivos tropicales. Los cacaotales son muy adecuados para refores- tar áreas completamente taladas y pueden convertirse en corredo- res biológicos entre segmentos de selva, permitiendo la repobla- ción de aves, mamíferos, reptiles y anfibios, entre otros. Además, el cultivo de cacao es una de las mejores alternativas de produc- ción para pequeños productores, según lo observado en Camerún, Ghana, Nigeria o Sulawesi, don- de la producción es más eficiente que en los grandes latifundios de Brasil y Malasia. Normalmente, los pequeños productores tienen ba- jos costos de producción porque dependen, en gran medida, de la mano de obra familiar y de un as- pecto muy importante, el íntimo conocimiento que existe entre el productor y su plantación. En Su- lawesi, pequeños productores han cosechado hasta dos toneladas de granos por hectárea, cantidades difíciles de alcanzar en plantacio- nes extensivas. Si Incluimos el va- lor de los árboles de sombra, en- tonces los cacaotales representan una buena alternativa económica para pequeños productores. Estos árboles no sólo ofrecen protección del viento, sino también produ- cen hojarasca, una de las mejores fuentes de materia orgánica, incre- mentan la aereadón, la infiltración y el drenaje, y fomentan la libera- ción lenta de los minerales en el suelo. Además, pueden escogerse determinadas especies de árboles que posean algún valor agregado. Por ejemplo, en Costa de Marfil los campesinos han introducido en las plantaciones de cacao 27 especies de árboles nativos, de los cuales casi 48% proveen leña y medici- na, 41 % alimento y 22% se utiliza para la construcción. Pese a lo anterior, el cacao, es- pecie domesticada en Mesoamérica que ha vivido en cercana relación con el hombre desde hace tres mil años, tiene poco impacto en el me- joramiento de la economía de los pequeños productores del trópico húmedo, especialmente en Méxi- co. Sin embargo, mediante un ade- cuado manejo de los cultivos y la Inclusión de valores agregados en la producción, como el cultivo or- gánico, el cultivo de variedades es- pecíficas, los estrictos controles de fermentación y secado, así como el fomento de la manufactura de cho- colate mexicano bajo ciertos están- dares de calidad, podrían generar Importantes ingresos económicos para los pequeños productores del sureste de México. Referencias Millón, R. F. 1955. When money grew on trees: a study of cacao ¡n antient Mesoameríca. Ph.D. diss. Columbia University, Ann Arbor, Michigan. * Director del programa "Árboles Tropica- les" del Centro de Investigaciones Tropicales (citro) Universidad Veracruzana. Última etapa de la elaboración de tabletas de chocolate fino enTurín, Italia. 5 Jorge A. Herrera-Silveira 1 y Octavio Cortes Balam 2 ENTRE LA TIERRA Y EL MAR, LAS LAGUNAS COSTERAS DE YUCATÁN L as lagunas costeras constituyen cerca del 13% del litoral oceá- nico. Distribuidas en todos los con- tinentes excepto la Antartica, están definidas como depresiones some- ras paralelas a la costa, separadas del mar por una barrera física, pero conectadas a él temporal o perma- nentemente por uno o más cana- les. Son diferentes de los estuarios, cuerpos de agua semicerrados, per- pendiculares a la costa y conectados con el mar por un río. Sin embargo, es frecuente encontrar ecosistemas que incluyen los dos tipos de am- bientes interconectados, los siste- mas lagunar-estuarino. Algunas características ecológi- cas de las lagunas costeras, como la alta productividad, la dinámica de nutrientes y la diversidad de há- bitats, proveen una serie de servi- cios ambientales que han impulsa- do su uso o abuso. El turismo en sus playas arenosas, del lado del océano, o el ecoturístico en man- glares y pastos marinos, además de la acuacultura y la pesca, promue- ven el desarrollo de estructuras, como puentes y caminos, que mo- difican los modelos de circulación del agua, y hacen que las lagunas sean receptoras de aguas contami- nadas que favorecen la sedimen- tación y eutrofización (proceso de enriquecimiento en nutrientes que ocasiona la proliferación de algas y la disminución del contenido de oxígeno). Muchas lagunas costeras han pasado de áreas de recreación y pesca muy productivas, a es- tanques contaminados que ya no 6 Petén Manglar Arrecife de coral Isla de barrera Entradasignificativa^ de aguasslibterráneas Pastos marinos Suelo cárstico producen bienes y servicios para sus comunidades. En este contex- to, surgió un movimiento mundial para desarrollar planes de manejo que equilibren los usos con la pre- servación y conservación de estos frágiles ecosistemas. La Península de Yucatán Localizada en el sureste de Méxi- co, la Península de Yucatán tiene un litoral de 1 250 kilómetros de largo. Es una terraza cárstica (te- rreno calizo con numerosas grie- tas y, en profundidad, cavernas y chimeneas) en más del 90% de sus 400 mil km 2 , su topografía es relativamente plana y con escasos accidentes orográficos. Aunque en el norte el clima es cálido-ári- do con poca precipitación anual, en el resto de la península el cli- ma es cálido y la lluvia abundante. La principal fuente de agua dul- ce que descarga a la zona coste- ra proviene de las aguas subterrá- neas en forma de manantiales, los cuales influyen en el régimen hi- drológico de los ecosistemas cos- teros, cuyo funcionamiento ecoló- gico está relacionado con fuerzas regionales (corriente de Yucatán, afloramiento de Cabo Catoche, descargas de agua subterránea), así como con eventos en pulsos (huracanes, frentes). Entre los ecosistemas costeros de Yucatán, las lagunas son un rasgo fislográ- fico característico que ocupa una superficie aproximada de 3900 km 2 (Figura 1). Las lagunas costeras de Yucatán La transición característica entre tierra y mar de la península está compuesta por manglar, laguna costera, isla de barrera, playa y el mar donde pueden observarse bancos de arena, en el Golfo de México, o barreras de arrecifes de coral, en el Caribe (Figura 2). Las lagunas, que representan 90% de los ambientes conectados al mar, ya que sólo hay estuarios en Campeche (Champoton, y La- guna de Términos) y Chetumal (Río Hondo), típicamente son poco pro- fundas (en promedio, uno o dos metros), por lo que la columna de agua generalmente está bien mez- clada, y están orientadas paralela- mente a la costa y separadas del mar por una Isla de la barrera. Nor- malmente tienen un intervalo pe- queño de marea y, a pesar de que su aporte de agua dulce es reduci- do en comparación con los estua- rios, tienen una gran influencia en la variabilidad espacial y temporal de la salinidad (Cuadro 1). El in- tercambio de agua con el océano Figura 2. Diagrama conceptual de las características ecológicas de las lagunas costeras de Yucatán. © Jorge A. Herrera Silveira y Tomás Zaldlvar Página anterior: Laguna Nichupté, Cancún. Fotos: © Fulvio Eccardi Figura 1. Lagunas costeras de Yucatán. © Jorge A. Herrera Silveira # 5 6 " 4 7 0 8 3 r 9 2 * > PENINSULA DE YUCATAN / * ( 1 Laguna de Términos 2 Laguna de Celestún . i 3 Laguna de Chelém i GOLFO DE MÉXICO 4 Laguna de Dzilám 5 Laguna Ria Lagartos 10 4 6 Laguna de Holbóx 7 Laguna Chacmockuk / 4 * »sr y 8 Laguna Bojorquez ' i 9 Laguna Nichupté 10 Bahia Ascención 11 Bahía de Chetumal . /r j Y yfc' ■ Y "j 7 Laguna costera en Sian Ka'an. suele restringirse a pequeñas en- tradas, lo que resulta en tiempos de residencia de agua relativamen- te largos. El área de agua es varia- ble (Cuadro 1) y la proporción de área de su cuenca, en relación con lagunas costeras de otros sitios de México, es relativamente grande, porque podría abarcar toda la Pe- nínsula de Yucatán, ya que en la gran mayoría de estos ecosistemas la entrada de agua dulce es vía subterránea, por las características cársticas que dominan el sustrato de esta reglón de México. Son ecosistemas sumamen- te productivos, por los subsidios de nutrientes que reciben y la diversidad de productores pri- marios (fitoplancton, vegetación acuática sumergida, manglares), ecológicamente complejos y es- tables, por la conectividad entre ambientes, manglares/lagunas/ pastos/arrecifes, y porque desa- rrollan mecanismos para enfren- tar la variabilidad ambiental y los eventos extremos como los hu- racanes. Como consecuencia de sus interacciones con sistemas ve- cinos, como el mar, los bosques de manglar, las zonas inundables y los arrecifes de coral, tienen muchas fronteras y son abiertos, por lo que en su conjunto repre- sentan un ecosistema de alta bio- dlversidad muy atractivo para di- ferentes tipos e intensidades de actividades humanas, las cuales han puesto en riesgo el equilibrio de sus funciones ecológicas. Con el crecimiento de los asen- tamientos humanos en las zonas costeras, aumentan las descargas de aguas contaminadas (Lagu- na de Términos, Chelem, Holbox, Chacmochuc, Bojórquez, Bahía de Chetumal), se intensifica la modifi- cación del balance entre los apor- tes de agua dulce y marina, pro- ducto de cambios en la dinámica natural de su conexión con el mar (Chelem, Nichupté, Bojórquez) y de la restricción del flujo de agua entre las diferentes zona de la la- guna (Celestún, Chelem, Nichupté, Bojórquez), también se Incrementa la destrucción de hábitat (pastos marinos y manglares) por las acti- vidades pesqueras (Celestún, Che- lem, Holbox, Bahía de la Ascensión) y turísticas (Celestún, Nichupté, Bo- jórquez), así como por el cambio de usos del suelo para desarrollos urbanos y turísticos (Ciudad del Carmen, Progreso, Cancún, Che- tumal). Además, como efecto del cam- bio climático, en las lagunas cos- teras de Yucatán, localizadas en la trayectoria de los huracanes del 8 Caribe, se espera un aumento en la frecuencia y severidad de esos eventos, así como el incremento del nivel del mar, lo que les afecta- rá porque sus elevaciones son típi- camente bajas. Diagnóstico Para el estudio y manejo de las la- gunas costeras pueden ser de utili- dad tres conceptos, estrechamente relacionados. El primero, el de co- nectividad, postula la existencia de interacciones entre ecosistemas a través de procesos biogeoquímicos y biológicos, los cuales están regu- lados por procesos hidrológicos que actúan en diferentes escalas espaciales y temporales. El segun- do, el de los controles tierra-mar/ mar-tierra, señala que los flujos tie- rra-mar (aportes de cuencas hidro- lógicas) y los de mar-tierra (mareas, corrientes, huracanes), ejercen pa- peles claves en la regulación del funcionamiento ecológico de cada ecosistema. El tercero, el de estabi- lidad ecológica, considera el regre- so (reslllencla) de los ecosistemas a su estado de equilibrio después de una perturbación. Los eventos naturales y las ac- tividades antróplcas modifican la intensidad de la conectividad en- tre ecosistemas, la magnitud de los controles tierra-mar/mar-tierra, e impactan las características de la es- tabilidad de los ecosistemas, trans- formando su condición de equilibrio dinámico y lo que se conoce como el estado de salud, concepto utili- zado para facilitar el intercambio e interacción entre investigadores, ad- ministradores de recursos naturales y tomadores de decisión. El diagnóstico de la sa- lud de las lagunas costeras de Yucatán no ha sido fácil, porque en México los crite- rios de calidad del agua de protección a la vida acuáti- ca para ambientes estuari- nos y costeros no incorpo- ra variables e indicadores que han demostrado su utilidad en los Estados Uni- dos y en la Comunidad Económica Europea, tales como las concentraciones de Clorofila-a, los floreci- mientos algales nocivos, la vegeta- ción acuática sumergida y la des- trucción de hábitats. En Yucatán, las lagunas cos- teras presentan un amplio inter- valo de características ecológicas, usos y abusos (Cuadro 1). Desde el punto de vista hidrológico, es- tán directamente relacionadas con la carga y las dinámicas de nutrientes, ambas asociadas con los aportes de aguas subterráneas y residuales, con los tiempos de residencia del agua, la escorren- tía superficial proveniente de las zonas de manglar y otras fuentes Laguna de Términos, Campeche. Cuadro 1 . Características, actividades y amenazas de las lagunas costeras de Yucatán. Area (Km 2 ) Profundidad media (m) Intervalo de salinidad Actividades Amenazas Laguna de Términos 1,500 3.2 2-37 - Pesca, ecoturismo, desarrollo urbano - Perdida de hábitat (vas y manglares) - Azotamiento - Eutrofización, contaminación, sobrepesca Celestún 28 1.2 5-37 - Pesca, ecoturismo, extracción de sal - Perdida de hábitat (vas y manglares) - Azotamiento - Eutrofización, sobrepesca Chelem 14 0.8 29-42 - Pesca, ecoturismo, desarrollo urbano - Perdida de hábitat (vas y manglares) - Eutrofización, contaminación Dzilam 10 0.6 20-37 - Pesca, ecoturismo - Contaminación Ría Lagartos 91 1 34-98 - Pesca, ecoturismo, desarrollo urbano - Perdida de hábitat (vas y manglares) - Contaminación, sobrepesca Holbox 275 1.5 22-49 - Pesca, ecoturismo, desarrollo urbano - Contaminación Chacmochuc 122 1 28-38 - Pesca - Contaminación, eutrofización Nichupté 41 2.2 16-36 -Turismo masivo, desarrollo urbano - Perdida de hábitat (vas y manglares) - Eutrofización Bojórquez 9 1.7 23-34 - Turismo masivo, desarrollo urbano - Perdida de hábitat (vas y manglares) - Eutrofización, contaminación Ascensión 740 2.5 3-38 - Pesca, ecoturismo - Contaminación Chetumal 1,100 3.3 2-20 - Pesca, ecoturismo, desarrollo urbano - Eutrofización, contaminación, modificación de hábitat vas: Vegetación acuática sumergida 9 Laguna de Dziiam exógenas (excretas de aves). Ge- de Bravo, neralmente, ricas en nitratos y sili- catos, pero pobres en fosfatos. El fitoplancton, componente de los ecosistemas acuáticos que res- ponde rápidamente ante los cam- bios en las condiciones ecológicas, se ha usado extensamente para caracterizar la condición que guar- dan los ambientes costeros. En las lagunas yucatecas, la comunidad de fitoplancton está compuesta por los grupos de cianobacterias, nanoflagelados, diatomeas centra- les, diatomeas penales, el grupo dominante, y dinoflagelados. Por su parte, la vegetación acuática sumergida dominante en términos de cobertura está forma- da principalmente por pastos mari- nos ( Thalassia testudinum, Halodu- le wrightii, Syringodium filiforme, Ruppia marítima) y macroalgas (Clorofitas y Rodofitas). Este com- ponente es sensible a los cambios en las condiciones de transparen- cia, los nutrientes en la columna del agua y a los daños físicos. La alta variabilidad Ínter e intra- laguna sugiere que la determina- ción de la condición, en términos de un diagnóstico que apoye las acciones de manejo para cada la- guna, debe basarse en una carac- terización sitio-específica, determi- nando la zonificación hidrológica y de hábitats, asi como su relación con las fuentes de impacto. Por ello, se recomienda: 1) ¡m- plementar programas de monito- reo de largo plazo para diferentes componentes, se sugiere la calidad del agua, la frecuencia y extensión de florecimientos algales, los cam- bios de cobertura de vegetación acuática sumergida y de mangla- res; 2) instalar plantas de trata- miento de aguas residuales en los actuales desarrollos urbanos; 3) rehabilitar la conectividad hidroló- gica entre las descargas de agua subterránea, las lagunas y la zona marina; 4) ordenar las actividades turísticas en ecosistemas someros (tráfico de embarcaciones); 5) or- denar la pesca de arrastre en zo- nas con vegetación sumergida; y 6) ordenar los asentamientos huma- nos en los márgenes de las lagunas costeras. Al menos 80% de las lagunas costeras de Yucatán presenta algún síntoma de impacto. Urge que to- dos los sectores reconozcan que los problemas ambientales en estos ecosistemas son una realidad, y que es necesario desarrollar programas de largo plazo relacionados con la conservación y el uso de sus recursos naturales. Si no se actúa de forma inmediata en la gestión, la investi- gación y el monitoreo de estas lagu- nas, se tendrá que remediar (restau- rar, rehabilitar) en lugar de prevenir, sobreexplotar en vez de aprovechar, y se verá alejarse la meta del manejo integrado de la zona costera de la Península de Yucatán. ' Profesor Investigador Titular del Depar- tamento de Recursos del Mar, cinvestav-ipn, Unidad Mérida. jherrera@mda,dnvestav.mx 2 Estudiante de doctorado del cinvestav-ipn, Unidad Mérida. 10 Patricia Manzano-Fischer', Rurik List 2y1 , Jean-Luc Cartron 3 , Rodrigo Sierra 2 y Eduardo Ponce 2 ELECTROCUCIÓN DE AVES EN LÍNEAS DE DISTRIBUCIÓN DE ENERGÍA ELÉCTRICA EN MÉXICO Ejido de San Pedro, Janos. Foto: O Rurik List E n el verano de 1999, mientras conducíamos por una polvo- rienta terracerla en los pastizales de Janos, Chihuahua, un águila real perchó en un poste de luz, momentos más tarde cayó al suelo como un bulto. Al revisarla, vimos las características plumas rizadas resultado de la electrocución al tocar cables de energía. Dos años antes, cuando se instaló una línea de distribución de energía eléctri- ca en medio de la colonia de pe- rros llaneros de El Cuervo, temi- mos que habría problemas con las aves que utilizan el área, atraídas por las altas densidades de ardillas de tierra que viven en los pastiza- les abiertos, sin árboles. Panorama mundial El crecimiento de la población hu- mana, y la consiguiente necesidad de energía, incrementa la mortan- dad de las aves por electrocución. En algunos casos, afecta poblacio- nes de especies en riesgo de ex- tinción, como la del águila impe- rial (Aquila heliaca) en el Parque de Doñana, en España. Prueba de ello es que al eliminar una línea eléc- trica que cruzaba por el centro del parque se incrementó la sobrevi- vencia de los pollos, de 17.6 has- ta 80% en los primeros seis meses de vida. Uno de los primeros países en reconocer que la electrocución de aves era un problema importante fue los Estados Unidos. En la dé- cada de 1970, se reunieron un grupo integrado por agencias del gobierno, compañías de electrici- dad y organizaciones no guberna- mentales para analizar la magnitud del problema y buscar soluciones. El resultado fue el manual "Prac- ticas Sugeridas para la Protección de Rapaces en Líneas Eléctricas", que ya tiene tres ediciones y se ha traducido al español. El documen- 11 Colocación de tubos de pvc en las lineas eléctricas. Ejido Casa de ianos. Foto: © Rurik List Tabla 1. Mortalidad por especie de ave en varias localidades del norte de Chihuahua. to reúne información sobre los as- pectos biológicos de la electrocu- ción de rapaces y brinda una clara explicación de los diseños de es- tructuras peligrosas para las aves y de cómo pueden modificarse para evitar futuras electrocuciones. Sin embargo, en los Estados Unidos existen cientos de compañías en- cargadas de proporcionar el sumi- nistro de energía eléctrica, lo cual es un obstáculo para realizar las prácticas sugeridas. En Sudáfrica, y otros países de África, el buitre del Cabo ( Gyps coprotheres), el buitre egipcio (Neophron pernopterus), el águi- la marcial ( Polemactus bellicosus ) y el águila negra ( Aquila vereauxií) son algunas de las especies que más se electrocutan en las líneas eléctricas. En una sola línea se en- contraron más de 300 buitres del Cabo muertos en un periodo de tres años. En América Latina existe in- formación sobre temas como la colisión de aves con las líneas de transmisión o los problemas cau- sados por los nidos de la cotorra monje ( Myiopsitta monachus). Sin embargo, sobre electrocución de aves en líneas de distribución hay poca investigación. La electrocución de aves en México Antes de 1997, el único registro en México sobre conflictos entre aves y líneas eléctricas era el del gavi- lán pescador ( Pandion haliaetus ) en Baja California, cuya población se incrementó gracias al uso de es- tructuras artificiales (balizas de se- ñalización, plataformas artificiales sobre postes del tendido eléctrico o junto a éstos) como plataformas de anidación. La colocación de estas estructuras evitó que los gavilanes anidaran en stitos peligrosos y se electrocutaran, además de solucio- nar el problema de los constantes cortes en el suministro de energía. Otro caso es en el área de Ja- nos-Casas Grandes, en Chihuahua, habitada por ganaderos y agricul- tores, principalmente Menonitas. En 1986 se construyeron los pri- meros tendidos eléctricos para pro- veer de energía a los ejidatarios y los ranchos privados. Los Menoni- tas, por sus creencias religiosas, no tuvieron electricidad hasta 1997. Entre octubre y noviembre, las co- lonias de Buenos Aires y El Cuer- vo fueron conectadas mediante una línea eléctrica que corre a tra- vés de la mayor colonia de perros llaneros de Norteamérica, desde entonces encontramos rapaces electrocutadas. Un año después se ini- ció un proyecto de mo- nitoreo para revisar esa y otras líneas del área, y se constató que el pro- blema no es exclusivo de las líneas nuevas, también existe en otras que cruzan las colonias de perros llaneros. En Janos se han encontrado bajo los postes: águila real ( Aquila chrysaetos), aguililla real (Bufeo re- gafe), aguililla cola roja (Buteo ¡a- maicensis), zopilote aura (Cathar- tes aura), lechuza de campanario (Tyto alba) y una gran cantidad de cuervos ( Corvus cryptoleucus). En la zona de Janos-Casas Grandes se han contabilizado 403 aves muer- tas por electrocución desde enero de 1999 (135 rapaces, 252 cuer- vos, 14 zopilotes y 2 garzas). Para la región del norte de Chihuahua, incluyendo Janos, el total es de 423 aves muertas registradas has- ta la fecha (Tabla 1). En marzo de 2002, el Instituto de Ecología de la unam, la Agrupa- ción Dodo A.C., la North American Bird Conservation Initiatlve, Unidos Especie Chihuahua Janos Feb 99-Mar 06 Feb 99-Mar 06 Asió llammeus 1 1 Tvtoalba 1 1 Buteo swainsoni 1 1 Parabuteo unicinctus 1 1 Pandion haliaetus 1 1 Haliaeetus leucocephalus 1 1 Falco o ereorinus 2 2 Buho virqinianus 4 4 Falco sparverius 5 5 Falco mexicanos 8 8 Cathartes aura 14 14 Acullá chrysaetos 24 24 Buteo recalis 28 28 Buteo jamaicensis 70 58 Corvus cryptoleucus 259 252 Mea berodias 3 2 Total 423 403 12 para la Conservación y la Agrupación Sie- rra Madre, conjun- taron esfuerzos para organizar el " 1 er Ta- ller sobre electrocución de aves en líneas eléctricas: hacia un diagnós- tico y perspectivas de solución", el cual fue posible gracias a la cola- boración del U. S. Fish and Wildlife Service y la National Fish and Wil- dlife Foundation. Cabe destacar el interés de la Comisión Federal de Electricidad, que en Janos ha tra- bajado junto a los expertos para identificar las líneas y estructuras con problemas y proceder a su modificación. Las especies en mayor riesgo Las aves rapaces y los cuervos son las especies electrocutadas con más frecuencia. Las rapaces me- dianas y grandes sufren el mayor riesgo ya que utilizan las líneas como sitios para perchar, cazar o anidar, específicamente en áreas donde no hay árboles u otras es- tructuras naturales que puedan usar para estos fines. Las especies que migran en grupos pequeños o en solitario también enfrentan un gran riesgo. Es importante dis- tinguir entre las aves con un alto índice de electrocución y con po- blaciones relativamente abun- dantes, como el cuervo llanero, y aquéllas con un índice de electro- cución menor pero con poblacio- nes en riesgo, como el águila real; la electrocución puede no tener un efecto aparente en la pobla- ción de las primeras o reducir sig- nificativamente la de las especies en riesgo. Las aves son atraídas por los postes de las líneas de distribu- ción eléctrica porque representan buenas plataformas para cazar, in- crementan el rango de visión y la velocidad mientras cazan, especial- mente en lugares donde la vegeta- ción es baja y el terreno es plano; también constituyen perchas acce- sibles y numerosas, su localización ayuda a las aves para delimitar sus territorios y les brindan sombra o sol. Sin embargo, al usarlos corren el riesgo de electrocutarse por la poca separación entre las fases y la gran cantidad de componentes co- nectados a tierra y sin aislar, auna- do a la falta de pericia de las aves jóvenes. Este es el caso del águila real, los juveniles son las víctimas más frecuentes de electrocución. Las características del problema En México, la electrocución de aves es diferente de la que ocu- rre en otras partes del mundo. En los Estados Unidos, la mayoría de los postes son de madera, por lo que un ave se electrocutará sólo si toca dos fases energizadas o una fase y alguna parte metálica que se encuentre conectada a tierra. En Europa, con frecuencia se uti- lizan postes metálicos, por lo que el riesgo de electrocución es similar al de México, donde la Comisión Federal de Electrici- dad (cfe) utiliza una variedad de postes de madera, metal y concreto. Pero los primeros se usan poco, por su costo y su limitada disponibilidad, mientras que los de concreto son los más empleados. Estos postes presentan el mayor riesgo para las aves; en su manufactura se utiliza un armazón de varilla que los con- vierten en una conexión a tierra. Con tan sólo tocar una fase y cual- quier parte metálica unida al poste o el poste mismo, un ave se elec- trocuta. El uso de crucetas metáli- cas es otra característica que incre- menta el riesgo, si un ave se para en la cruceta y toca una fase ener- gizada se electrocuta. En nuestro país, la longitud de las crucetas es de 2 metros, pero para evitar las electrocuciones se sugiere una lon- gitud mínima de 2.5 metros, dis- tancia que ofrece un mayor espa- cio entre las fases. El águila real, por ejemplo, puede alcanzar una envergadura de 2.2 metros en la hembra y 1.82 en el macho. Entre las estructuras que re- presentan un mayor riesgo se en- cuentran los transformadores, los postes terminales y de deflexión y todas aquellas que tienen puentes sin aislar. Los postes terminales do- bles con doble cruceta se asocian con una mortalidad más alta que cualquier otro tipo de poste de con- creto (Tabla 2). Ejido Tierras Prietas, Janos. Foto: © Eduardo Ponce Tabla 2. Número de aves electrocutadas en ocho líneas de distribución eléctrica en el área de Janos, entre mayo de 2005 y enero de 2006. Estructura asociada con aves electrocutadas May Jul Sep Nov Díc Ene 05 05 05 05 05 06 Postes trifásicos no modificados 10 2 8 9 3 3 Poste trifásico modificado 3 4 2 Terminales dobles con cruceta doble 4 4 1 Terminales dobles con cruceta doble modificados 2 1 Otras estructuras 1 1 Postes dobles de madera con cruceta metálica t 2 Poste en ánoulo 1 Total de aves muertas 16 7 20 13 3 3 13 ei Cuervo, Janos. Algunas soluciones Foto: o Ruñk List g n | a re g¡ón de Janos-Casas Gran- des, Chihuahua, el personal de la cfe cuenta con experiencia en la modificación de estructuras de riesgo, como la colocación de cru- cetas de madera que han resultado muy efectivas para reducir el ries- go de electrocuciones (además de ser no conductoras, como son más largas, aumentan la distancia entre las fases). Sin embargo, aún se re- quiere la colocación de materiales aislantes para los cables y demás componentes de la estructura, es- pecialmente en aquéllas de alto riesgo como las terminales dobles y los transformadores. Antes de los actuales esfuerzos de modificación, las electrocuciones menor, pero se ne- cesitan más mués- treos para verificar la efectividad de todas las técnicas y de los materiales utilizados. En la División Centro Occidente de la cfe se instalaron cables semi- aislados en algunas líneas, pero preferentemente en las zonas ar- boladas. A pesar de que existe la información necesaria, y al menos dos compañías en México produ- cen materiales para el aislamien- to de componentes en las estruc- turas, la modificación en líneas existentes puede resultar costosa, por lo que debe acompañarse de estudios que identifiquen las que son causantes de electrocuciones y que sufren continuos cortes del suministro. La creación de nuevas líneas con lineamientos de cons- trucción amigables para las aves puede resultar económicamente viable, pero se debe trabajar en di- versos frentes y con comunicación de las aves en pos- tes de concreto es- taban ampliamente distribuidas en So- nora, Chihuahua y, en menor medi- da, Baja California Sur. Ahora, con la gran cantidad de postes de concre- to modificados, la mortandad de ra- paces y cuervos en las líneas de trans- misión del noroeste de México debe ser directa entre las instituciones aca- démicas, las organizaciones no gu- bernamentales, las empresas, la cfe y la Compañía de Luz y Fuerza. Durante el 1er Taller sobre elec- trocución de aves, los expertos y la cfe acordaron una serie de medidas para evitar las muertes en las líneas de energía: 1 . - Determinar las áreas priori- tarias, las especies Involucradas, y los materiales y métodos para mo- dificar las líneas existentes o para hacer seguras las nuevas. 2. - Hacer un diagnóstico nacio- nal de la problemática. 3. - Modificar las estructuras problema en áreas donde se ha- yan registrado Incidentes. 4. - Crear un programa de moni- toreo para el personal de la cfe y de las áreas naturales protegidas o crí- ticas, que deberá incluir: a) cursos de capacitación para los equipos de mantenimiento que revisan regular- mente las líneas; b) producción de manuales, videos y otros materiales; y c) creación de una base de datos sobre eventos relacionados con la electrocución de aves. 5. - Analizar la normatividad ac- tual y las posibles modificaciones para alcanzar el mejor mecanismo de solución del problema de elec- trocución de aves. 6. - Incorporar, en las manifes- taciones de impacto ambiental, el seguimiento de las acciones reco- mendadas para mitigar los riesgos para las aves y analizar su efectivi- dad, y de ser necesario, plantear su modificación. 7. - Establecer canales de comu- nicación interinstitucionales que permitan un acercamiento mul- 14 La electrocución de aves no sólo afecta a las poblaciones de las especies involucradas, también tiene un fuerte impacto en la economía local tidisdplinario para la solución de los conflictos que surgen entre las aves y las líneas eléctricas. Desafortunadamente poco se ha conseguido en relación con es- tos objetivos. La falta de fondos, además de la colocación de líneas en todo el territorio nacional sin considerar las medidas preventi- vas, hace que el número de aves electrocutadas siga en aumento. Hay poca comunicación ¡nterins- titucional y poca disposición por parte de las agencias guberna- mentales para impulsar la coloca- ción de las estructuras para mini- mizar riesgos de electrocución, y otros conflictos como colisiones y daños, en los sitios donde son necesarias. La cfe aplica soluciones locales, pero no hay seguimiento del efecto de las modificaciones o aditamen- tos para eliminar los problemas. Presuponen que son efectivos pero no tienen datos que indiquen cuá- les funcionan y pueden utilizarse en otros sitios y cuáles son un gasto inútil. Por ejemplo, en la cfe de la División Norte se emplean tubos de pvc para aislar los cables adyacentes a la cruceta, pero ese material no es resistente a los rayos ultraviole- ta, por lo que se degrada, se rom- pe y cae al suelo; además, al no ser creado específicamente para cubrir las fases, no ajusta bien al cable y se desplaza. La electrocución de aves no sólo afecta a las poblaciones de las es- pecies involucradas, también tiene un fuerte impacto en la economía local. El elevado número de cortes de energía que causa se traduce en un alto costo para los pueblos y comunidades, los agricultores e incluso para las compañías de elec- tricidad que tienen que reparar los daños. Por ello, la solución de este problema beneficiará tanto a las aves de México como a los usua- rios de la electricidad. ' Agrupación Dodo A.C. pmanzano@prodigy.net.mx 3 Instituto de Ecología, Universidad Nacio- nal Autónoma de México 3 Department of Biology, University of New México, Albuquerque. 15 LIBROS LIBROS LIBROS LIBROS Las plantas, compañeras de siempre... La experiencia en Morelos. Esta obra contiene información etnobotánica (generada entre 1979 y 2001 en el Laboratorio de Ecología del Cen- tro de Investigaciones Biológicas de la Universidad Autó- noma del Estado de Morelos), sobre algunas plantas útiles del estado. Como preámbulo se presenta un análisis sobre alguno de los rasgos botánicos y culturales de las plantas, los cuales contribuyen en la explicación de su uso, sobre todo de aquéllas con una mayor dominancia cultural. El resto del contenido son monografías que incluyen in- formación general sobre las familias y géneros botánicos, el nombre científico de las especies, la sinonimia científica utilizada en las fuentes etnobotánicas consultadas por los autores, la descripción botánica, los nombres vernáculos, el lugar de origen, el hábitat, la distribución, el manejo, los usos, la fenología, las precauciones en el empleo de la planta, la propagación, la categoría de riesgo y el conteni- do nutritivo. También se incluyen algunas notas sobre su ecología, biología, etimología, condiciones de almacena- miento de propágulos y el manejo en plantación. Además, contiene 4 láminas a color de las especies representativas utilizadas con fines comestibles, ornamentales, medicina- les y mágico-religiosos. COMISIÓN NACIONAL PARA EL CONOCIMIENTO Y USO DE LA BIODIVERSIDAD La conabio te Invita a consultar sus acervos bibliográfico y de imágenes relacionados con la blodlversldad. Para mayor Información llama al teléfono 5004 4972 o consuta la página web . La misión de la conabio es promover, coordinar, apoyar y realizar actividades dirigidas al conocimiento de la diversidad biológica, así como a su conservación y uso sustentable para beneficio de la sociedad. secretario técnico: Juan Rafael Elvira Quesada coordinador nacional: José Sarukhán Kermez secretaria ejecutiva: Ana Luisa Guzmán directora de evaluación de proyectos: María del Carmen Vázquez Los artículos reflejan la opinión de sus autores y no necesariamente la de la conabio. El contenido de Biodiversitas puede reproducirse siempre que se citen la fuente y el autor. Certificado de Reserva otorgado por el Instituto Nacional de Derechos de Autor: 04-2005-040716240800-102. Número de Certificado de Licitud de Título: 13288. 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