'/iV/1 C/s HARVARD UNIVERSITY LIBRARY OF THE MUSEUM OF COMPAHATIVE ZOÓLOQY fe? / O ol f^O-ÜLoJk tr 4id^ 10, i m :i íé^tCr °^^ [^ boletín D DE LA. iCADEMIA ICIOML DE CIENCIAS EN CÓRDOBA (REPÚBLICA ARGENTINA.) TOMO IV. ENTREGA I. BUENOS AIRES Litogr.. Imprenta y Encuademación de Guillermo Kraft 4881. D 1^ J-^ ^ ÜÜL 201942 1 1 p »• (^/X^ Éít¿. É^JUií MÜi boletín X)E LA ONAL r>E CIENCIAS EN CÓRDOBA (REPÚBLICA ARGENTINA.) TOMO IV. ENTREGA I. BUENOS AIRES Litogr., Imprenta y Encuademación de Guillermo Kraft 1881. CONTENIDO DE LA la ENTREGA DEL TOMO IV. PARTE OFICIAL. Pag. Necrología del Dr. D. Augusto Grisebach, miembro honorario de la Acad I Lista de las publicaciones recibidas por la Academia desde el 1 " de Enero hasta el 1 5 de Mayo ^^ Documentos oficiales ^^ PARTE CIENTÍFICA G. HIERONYMUS, Sertum Sanjuaninum <> descripciones de plantas fanerógamas y criptógamas vasculares recolectadas por el Dr. D. Saile Echegaray en la Provincia de San Juan 1 G. HIERONYMUS, Sobre la necesidad de borrar el género de Compues- tas, Lorentzia (Griseb.), y sobre un nuevo género de Euforbiáceas Lorentzia , . . . 74 G. HIERONYMUS, sobre una planta híbrida nueva, formada por el Lycium elongatum(Miers) y el Lycium cestroides (Schlecht), con lámina , . . , ?» . . 102 Dr. D. Augusto Grisebach. Nuestro miembro honorario, el Dr. Grisebach, catedrático de la Universidad de Gotinga (Alemania) y Consejero de Estado, dejó de existir el 7 de Mayo de 1879. yVugusto Grisebach, hijo del Auditor general Grisebach, nació el 17 de Abril de 1814 en la ciudad de Hanóver, en cuyo liceo entró hacia el año 1820, para empezar sus estu- dios, permaneciendo en él hasta el año 1829; después de haber pasado por todos los cursos de dicho colegio y no teniendo aun mas de 15 años, sus padres lo mandaron para perfeccionarse á la Academia de Ilfeld, donde rindió su examen de Bachiller para cursar las aulas de la Universidad. Desde el otoño del año 1832, se encontraba Grisebach en Gotinga en calidad de estudiante de esa Universidad, en la que mas tarde debia ocupar una cátedra; allí se dedicó durante dos años y medio al estudio de la medicina y de las ciencias naturales, y formó relaciones con muchos jóve- nes que mas tarde han desempeñado papeles importantes, y entre ellos con el Príncipe de Bismark, cuyos talentos extraordinarios reconoció ya Grisebach en aquel tiempo. Fué durante las vacaciones del año 1833 que Grisebach efectuó su primer viaje científico en el Delfinado y la Provenza. En Abril del año siguiente se trasladó á Berlin, con el fin de terminar sus estudios en la Universidad de esa ciudad. En el año 1836 presentó sus tesis é hizo la disertación de costumbre para recibir el título de Doctor, y ese mismo año se habilitó en esa Universidad como profesor agregado (Privatdocent). Sin embargo, la muerte de su padre que entonces ocurrió, lo puso en la — II ^ obligación de regresar á Gotinga, donde se ocupó durante todo un año con estudios de botánica sistemática y fítogeo- gráfica, y publicó su primer;), obra seria « Genera et species Gentianearum», al mismo tiempo que iba preparándose pa- ra emprender su viaje científico á Turquia, que principió en el mes de Marzo del año 1839. La obra que publicó con los materiales acopiados durante ese viaje, vio la luz en el año 1841 (Reise durch Rumelien uncí nach Brussa), y la aparición de esa obra tuvo por resultado de hacerlo nombrar este mismo año catedrático extraordinario de historia natural en la Facultad de Medi- cina de la Universidad de Gotinga. Un año después, hizo un nuevo viaje científico, y fué la Noruega que entonces exploró; á consecuencia de dicho viaje se entabló una correspondencia muy activa entre Alejandro de Humboldt y Grisebach, quien á ñnes del año 1843 y principio del 44 pubhcó su ((Spccilegium Florete Runielicae et Bithytiicaen, obra en la que reunió los resul- tados botánicos obtenidos en su viaje á Turquía. Fué en el mes de Setiembre de 1844 que se desposó con la Señorita Evelina Reinbold, matrimonio del que nacieron dos hijos. Habiendo sido nombrado catedrático ordinario en Gies- sen en el año 1846, nombramiento que no quiso aceptar, fué llamado con igual título, en el año 1847, á regentear una cátedra en Gotinga. No podemos entrar aquí en la apreciación de sus méritos y de la simpatía y adhesión que se conquistó cerca de la Administración de la Universidad de su patria y de sus conciudadanos, y solo mencionaremos que reiteradas veces se ha visto en la precisión de renunciar puestos honoríficos y nombramientos que le fueron hechos para otros centros científicos, conducta á la que fué impulsado por su amor á la ciudad y Universidad de Gotinga. '^ — 111 — En el año 1852 efectuó un viaje á la Sierra de los Carpa- tos y en 1853 otro de exploración en los Pirenéos. Fué en 1857 que recibió del Gobierno inglés el honorífico encargo de hacer una obra sobre la flora de las colonias inglesas de la India Occidental (Flora of the British West- Indian Islands), obra que fué dada á luz en el año 1864, y que él mismo consideraba ser el primer trabajo sistemático de su vida. El año 1872 vio aparecer su importantísima obra sobre la fitogeografía de la tierra (Vec/etation der Erde), cuyos materiales estaba reuniendo desde el tiempo en que, como discípulo, frecuentaba la Academia de Ilfeld. El gran valor de esta obra, como igualmente el de todas las otras que ha publicado posteriormente, está bien reconocido por todos los hombres científicos del ramo, que deploran la pérdida de este sabio eminente que por todos es considerado en botáni- ca como una autoridad de primer orden. Así es que sería supérñuo entrar á enumerar todas las distinciones que le fueron dadas, y honores que le fueron discernidos, tanto por los Gobiernos de su patria y de otros países, como por una cantidad de Academias y Sociedades científicas. Nuestra x^cademia lo nombró miembro honorario por los importantes méritos que ha conquistado en la exploración de la flora de la República Argentina, pues los dos gruesos volúmenes que contienen sus descripciones de las plantas coleccionadas por los Sres. Lorentz, Schickendantz é Hiero- nymus, en los años 1870 á 76: iiPlcmtae Loi^entzianae» y «Symbolae ad Floram Argentinam» son un v^erdadero «monumentum aere perennius» que él mismo se ha ediñca- do en la República Argentina y en toda la América del Sud . Mas tarde, cuando entre los hijos de esta tierra, habrá muchos que se dediquen á la ciencia, ellos pondrán enton- ces mas de relieve los méritos de Grisebach lo que por ahora no nos es posible hacer, y no existe la menor duda — IV — de que el nombre de Augusto Grisebach, puesto por los botánicos argentinos en una luz mas clara, figurará siempre en la historia de la exploración de la Flora de su pais, antes tan poco conocida. La muerte de Grisebach es una pérdida de las mas sen- sibles para nuestro Instituto, y la deploran especialmente los hombres científicos á quienes el Exmo. Gobierno de la Nación ha encargado la honoiífica tarea de hacer la exploración científica de la ñora de este pais. V — LISTE des publications regiies par rAcadémie du l^"" Janvier au 15 Mai 1881. Les Sociétés Scientifi plantas recogidas ; era muy difícil, especialmente juzgar si se encontraban en la colección especies nuevas, dosconoci- das todavía en la ciencia y reconocerlas con seguridad Recien ahora por haber traido de Europa, hace poco tiempo, lo mas indispensable de la referida literatura, he podido proceder á la publicación de la presente obrita en la que reimo todo el material con (pie el Dr. Echegaray ha obse- quiado el Museo Botánico de la Universidad Nacional de Córdoba. Antes de entrar en esta materia aprovecho la ocasión para manifestar al Dr. D. Saile Echegaray las expresiones Bill, Af.iil. IV. t \ í! A — 2 - de lili íntimo agradecimiento como representante del Insti tuto Científico á mi cargo. El Dr. Echegaray es el primer y hasta ahora el único hijo del país que ha herborizado sistemáticamente y reunido la colección mas completa posi- ble de la vegetación de los parages visitados por él (*), lo que tanto mas debe ser apreciado cuanto que al mismo tiempo se ha dedicado á recolectar objetos de los otros reinos prin- cipalmente del Zoológico. Así entre otras ha formado una linda colección de arácnidos en los alrededores de San Juan y las descripciones y determinaciones de una parte de ellas se han pubücado en el Bol. de la Acad. Nac. de cieñe, exact. t. II p. 255 por el Dr. D. T. Thorell, catedrático de Upsala. Por « equivocación », ó, como me ha comunicado el Dr. D. H. Weyenbergli que ha hecho algunas de las correcciones de impresión del trabajo mencionado, «por error tipográfico» se atribuye en la introducción de dicho trabajo la colección de arácnidos, hecha, como hemos dicho por el Dr. Echegaray en los alrededores de San Juan, al Dr. D. H. Weyenbergh, que hasta ahora no ha pisado el territorio de dicha Provincia. Cumplo acjuí un grato deber rectificando las palabras del Señor Thorell y este «error tipográfico», restableciendo al Dr. Echegaray los méritos que se ha conquistado por haber obtenido adelantar la exploración de la Fauna argentina, tanto mas cuanto que sé por propia experiencia que los viages en las provincias occidentales de la República son mucho mas penosos que los en las del Litoral y Centro, en donde puede aprovechar- se de las comodidades que ofrecen los ferro-carriles y buques de vapor para hacer paseos científicos. «Suum cuique » ! El Dr. Echegaray en su obrita sobre su colección de plan- tas, dio ya una lista de la representación numérica de cada (*) V('.a.ot. Mise. TTT p. 13^ n. 37). Se halla en la Quebrada del Paraniillo; en el mes de Enero con flores y frutos casi maduros. 4. Sis!/mbrnnn conescens (Nutt. gen. am. 2. p. 68). — (Echeg. 1. c. p. 351 n. 69). o. Sisyinbriiiin títtcacense (Walp. Nov. Act acad. Leop. Carol. XIX suppl. I, 249.— Wedd. Chl. and. tab. 85 C).-- En las cercanías del Leoncito; en Enero con flores y frutos. 6. Brassica nigra (Koch. D. fl. 4. 713) syn. Sinapis nigra (L. sp. 933).— En las cercanías del Leoncito; en Enero con flores. 7. Lepidiinn pul>escens (Desv. .lourn. bot. 3 p. 165 et 18Ü.) (Echeg. 1. c. p. 351 n. 70).— 5. Hea-aptera iñnnalifida (Gil!, et Hook. IJot. Mise. I. p. 350 n. 1 tab. 72).- Forma caulibus (maximis ad 20 cm. longis) cíespitosis, ramosis, e rhizomatibus (elongatis, subterraneis, ramo- sis) ascendentibus; foliis praecipue basalibus, ambitu ovalibus vel subol)Ovatis, pinnatifido-dentatis vel lobato- serrato-dentatis; radicaiibus inferné in petiolum loiigum attenuatis; caulinis sensini minoril)us, subsessijibus, ómnibus pilosis; racemis elongatis, laxis; pedanculis pedicelliseque hirsutis; stigmate in fructu vértice sulca- to-bilobo: cotvledonibus accumbentibus. El Dr. Echegar^iy ha recogido de esta planta un solo ejemplar con frutos no maduros en las cercanías del Leoncito en el mes de Enero.— He tenido primeramente mis dudas de si la planta es verdaderamente la descrita por Gillies y Hooker: ni la descripción do esta, ni su imagen corresponden al ejemplar mencionado. He duda- do también si nuestra planta pertenece al género Hcxap- tem, estando descrito por todos los autores el embrión con cotiledones inciimbentes. No obstante, habiendo exami- nado una otra especie de ílexaptera, que tengo en mi poder, he adquirido la convicción de que tal descripción carece de fundamento: tengo además, de nuestra especie otros ejemplares recogidos en la Sierra Famatina, que muestran una gran va,ria]3ilidad no solo en la forma de las hojas, sino también en el largo del tallo florífero. En- tre estos ejemplares el del Leoncito es casi intermedio, reuniendo una forma extrema con la otra; y soy de opinión de que la variabilidad de esta especie es quizá todavía mayor; asíe^ que, aunque la descripción y la imagen citada no corresponden bien á nuestro ejemplar, sin embargo este pertenece á la referida especie. En caso de que todas las especies de Hexaptera tengan cotiledones acumbentes, el género deberá trasponerse de la tribu de las Lepidlncas á las Tías pul cas y colocarse próximo al género Cremobolus (DC), con que tiene mu- chos caracteres comunes (véase las características en Bentham et Hooker, Genera plant. I. p. 90 n. 107 y 110). Pero si los cotiledones se hallan en otras especies, así como lo indican Hooker y Gillies (y también F. M. Bar- néoud en Gay, hist. Chil. bot. 1 p. 176, Weddell en Chlor. and. en la lámina 86, fig. F, y Bentham y Hooker en Gen. plant I p. 90) se debería dividir el género Hexaptera en dos, reuniendo las especies cuyo embrión tiene cotiledones acumbentes en la semilla, para formar un nueve género de las Tlaspldeas. A estas últimas especies pertenece también una que recogí en la Sierra de Famatina y que considero como una variedad de la //. cu nei folia (Gilí, et Hook). VIOLÁCEAS 9. Viola Flos Idae (Hieron n. sp.) V. ex affinitate V. PhiUppli (Leybold), V.granulosae (Wedd.) et V. volca nicíe (Gilí.), perennis. líadix fusi- — 6 — formis; rhizomata e radice plura, sordide albescentia, rosulifera, filiformia, elongata (circiter 6 cm. longa) tenuia (diámetro circiter '/a mm. longa), bifoliolata, (fo- liolis oppositis, incl. lamina rhomboideO-ovata, subinte- gra, in petiolum attenimta, circiter 5 mm. longis), rarius (foliolis alternis, 1-3 supra par foliolorum oppositorum adjectis) paucifoliolata. Folia in ápice rhizomatum fasciculato-rosulata. Lami- na foliorum rhomboideo-ovata, obtusa, ad apicem versus suldobiilato-crenata (lol)ulis in utroque margine 5-6, ob- tusis, circiter 7-2 mm. longis, 7» mm. latis, flavo- viridi- marginatis, plus minus ciliatis; pilis simplicibus, taenige- forniil)us), vel foliorum infimorum interdum subintegra, obsolete crenata, sul)orlMcularis, supra subreticulatim, farinoso - rugosula, subareolata, infra kevis, viridis, parte basali glandulis paucis, fuscis, linearibus, instruc- ta vel eglandulosa, nervosa (ñervo mediano conspicuo), 2-4 mm. longa, 2-4 mm. lata, in petiolum parce cilia- tum, 0-7 mm. longum, V2-V4 mm. latum cuneato-atte- nuata. Stipulae 2, submembranaceíe, sublacerato-cilia- tíe, lineares, circiter '/i mm. latie, 2 mm. longa?, acutius- culge. Flores minuti, pedunculati (pedúnculo 6-8 mm. longo, bibracteolato: bracteolis oppositis, membranaceis, uninerviis ñervo subvirescente, ciliatis, lineari-lanceola- tis, 4 mm. longis, 1 mm. latis). Calicis lobi 2-2 7- mm. longi, 1-1 7^ mm. lati, linear oblongi; herbacei, virides,glabriusculi margine membra- nacei, aibi, subciliati, ápice obtusi vel acutiuscuii, extus interdum glandulis l-o fuscis, linearibus instructi. Coro- la petalum inferius obcordato-cuneatiim, circiter 7 mm. longum, ad 5 mm. ad apicem versus latum, álbum, lobulis obtusis, 2-2V2 mni. latis, 2-2y2 mm. longis, vio- láceo - striatis, basi in mediana lutescenti - maculatum, calcare albo, circiter 2 mm. longo. Pétala caetera subaequalia, integra, cuneata, ápice — / truncata, circiter 5 mm. longa, api(;e circiter 2 mm, lata, alba, parte superiore in mediana inigulaviter vio- lacoo-striato-ma culata; lateralia margine superiore gl¡in- duloso-ciliata (glandulis albis, símplicibus). Stamina sessilia; connectivis albo membranaceis, compinnatis, ápice in membranam aurantiacam, late ovatam, V* mm. longam, 7^ mm. latam, obtusam producta; antlierarum loculis circiter 1 mm. longis, y 3 mm. latís, ápice in pilum brevem, álbum, subulatum productis. Stylus ápice incurvatus, rostratus (rostro circiter 73 mm. lon- go), claviformis, appendicibus membranaceis 3, obovato- cuneatis, truncatis, albis, minute glanduloso-ciliatis, vix 72 rnm. longis, ápice 7» nim. latis coronatus. Capsula glabra, straminea, circiter 5 mm. iongn. Semi- na (an perfecte matura?) sordide alba, vel fuscescentia, vix nitida, ovoidea, vix 2 mm. longa, 1 mm. a-l basim versus diam. Se halla en el cerro del Tontal y en las orillas del ajroyo de las Cabezeras cerca del Leoncito. En Enero con flores y frutos. var. pseudo-volcaníca (Hieron n. v.) Foliorum lamina profundius lobulata (lol)ulis 74 mm. latis, 17-^ llalli- longis, linearibus, longiuscule ciliatis, an- gulis Ínter lóbulos rotundatis, saepius glándula niinima, orbiculari instructis), ovato-cuneata, pagina interiore glandulis linearibus, fuscis, circiter 5-6 instructa. Specimen pra^ter flores perfectos, a3sti vales, in axil lis foliorum inferiorum steriles, minutos, prsecociores, bre- viter pedunculatos, petalis albidis, subiequalibus, 4, vix 1 7-' iiini. longis, ^/4 mm. ápice latis, cuneatis, ([uiuto interiore 17-' mm. longo, 1 mm. lato, ápice subemargina- to, pr^ebet. A Viola volcánica (Gilí.), cui habitu simi- llima, differt stylo appendiculis tribus coronato et colore coroUse (conf. descr. ap. Gay liist. chil. bot. I p. 224). • Esta variedad se halla con la formagenuina en d Cerro del Tontal y es interesante por sus flores dimorfas, pro- duciendo ñores pequeñas, estériles antes que mayores y tértiles; mientras que otros representantes del género Viola muestran generalmente lo contrario, es decir, producen primeramente (en la primavera) flores mayores á veces estériles, y entonces (en el verano) pequeñas y fértiles.— En los ejemplares de la forma jenuina no he podido encontrar flores pequeñas, pero seguramente ella las produce también. 1<). Viola Flos Maride (Hieren, n. sp.) V. exaffinitate V . Montarjníi (Gay^. Perennis. Uadix fusiformis, transversa rugulosa. Pihizomata plura e radico filiformia, tenuia (circiter 1 nmi. diauí.), inferné albescentia, superno violácea, bifoliolata (foliolis oppositis, oblongo-spathulatis circiter 3mm. longis, 1 nnn. latís, obtusis, basi connatis, estipu- latis), vel paucifoliolata (foliolis 1-:!, rhomboideo-vel ovato-spathulatis, in petiolum2-omm. longum attenua- tis,alternis, suprapar foüolorum oppositorum adjectis). Folia pleraíjue in ápice rhizonatum fasciculato-rosula- ta (diámetro rosularuní 1-2 cm. longa); lamina integra, subsemiorbicularis; vel transverso rhomboidea, vel transverso oblonga, 2-2 '/--í mm. longa, 4-5 mm lata, in petiolum súbito attenuata (petiolo ciliato, ad 3-5 mm. longo, circiter 7* mm. lato), et hinc margine longiuscu- le ciiiata, margine apicali retúndate brevius ciliata, vel glabriuscula , in utraque pagina pilis brevissimis adspersa . farinaceo-glauca, anguste subflavescenti- marginata. Flores minuti, pedunculati; pendunculis pilosis (pilis reversis), circiter 4-5 nmi. longis, ápice recurvis, basi bibracteolatis (bracteolis oppositis, ovatis, o mm. longis, 1 nun. latis, pellucido-membranaceis, dorso pilosLilis, margine ciliatis, ápice obtusiusculis. Calicis iobi ovati, obtusi, pilosnli, herbacei, margine — 9 — angiiste pellucido-iiieiiibiairaoo ciliati, 3 mm. loiigi, 1-1 7^ lati. Corollie petalum inferius caíteris minus, lami- na atro-violacea, suborbiculaii in parteni basalcm au- rantiacam cuneataní contractiim, 4 min. (incl. calcare albo, brevissimo, vix ^ 4 mm. longo, lotundato) longum, ápice 17* -3 mm. latum. Pétala lateralia obli(pie-ovato-cu- n( ata, obtusa ápice atrovioiacea, in medio partis basalis aurantiaco-maculata, utrinque margine et ungue albo- membranacea, margine superiore parce glanduloso- ciliolata (glandulis simplicibus), 3 mm. longa, l'/> mm. lata. Pétala superioraiato-cuneata, subtruncato-obtusa, 3 mm, longa, ápice '-3 mm. lata, atrovioiacea, basi triner- via, vix 1 mm.lata, aurantiaco-maciilata,albo-marginata. Stamina sessilia, 2 mm. longa; connectivo albo-mem- branaceo, complanato ápice in niembranam aurantia- cam, orbicularem producto ; antheraí loculis ' ápice in pilum brevem álbum, subulatnm productis, 1 '/* mm. longis, Ys mm. latis. Stylus erectus, 1 7* mm. longus, ápice incrassatus, stigmate laterali brevissimc rostra- tus, clavatus, ápice lineis 3, paulo prominentibus, sub parallelis, in rostrum confluentibus angiilato-notatus, caeterum inappendiculatus. Capsula glabra, straminea, ovato-triquetra, 6-8 sperma. Semina ovata, 17* mm. longa, 1 mm. suprabasim crassa, ochracea vel olivaceo- fusca (an perfecte matura?) Llaman á esta nueva violeta con el nombre vulgar bailabuen. Se halla en el Cerro del Tontal y en las orillas del arroyo de las Cabezeras cerca de Leoncito; en Enero con flor y fruto. La Viola Montagnci, descrita por Gay, (hist. chil. bot. 1 p. 222) debe ser muy semejante á la Viola Flos Mariae pero según la descripción de Gay es diferente de nuestra violeta, por sus hojas puntiagudas, el color violado-purpú reo de la cerolla, por su apéndice rollizo, algo dilatado en la base que tienen dos de las anteras, las cnpsuhis subglo- — lo- bosas ó elípticas con 3 á 4 semillas aovadas, de dos líneas de largo y una de ancho. La variedad glandulosa que describe Pliilippi (en Linnasa 33 p. 15. n. 607), tal vez per- tenece á nuestra violeta. var. a) nivea (Hieron n. v.) Rhizoma albidum, iy2mm.diam., foliolosum. Folia rosulse (in speciniine único longius quam in forma genuino, petiolatti, petiolis maximis circiter 1 cm. Ion- gis), pagina superiore niveo-farinacea, pilis minutissimis, glandulosis, simplicibus denso adspersa, pagina inferie- re pilosula, margine inferiore densius et longiusciile ciliata (ciliis ad 2 mm. Jongis). Flores longius pedun- culati (pedunculis ad 1 cm. longis). Rosuke unicae, quíe exstat diámetros 3 cm. longa. Con la forma genuina en el Cerro del Tontal; en Enero con flores y frutos.— Las ñores han perdido su color en el ejemplar, pero tienen la misma forma que las de la plan- ta genuina y creo por tal razón que esta linda violeta no es sino una variedad de la V. Flos Mariue. var, viresccns (Hieron n. v.) Rhizoma álbum, infra rosulam foliolosum; folia pagina superiore glabriuscula, ruguloso-areolata, viri- dia, pagina inferiore pilosula, glandulis, fuscis, liuea- ribus,minutís margine instructa, petiolo et margine in- feriore laminas, utut var. nivea, dense et longiuscule ciliata, in specimine ápice saepius brevissime acami- nata, mucronata; rosulse diámetros 3 cm. longa. Folióla aJiquOt fasciculata in rhizomate infra rosulam, in axillis ñores minutos, steriles gerunt. Igualmente en el Cerro del Tontal; en Enero con flores y frutos. El color de las flores se ha perdido en el ejem- plar, y podría añadir aquí lo dicho de )a variedad anterior mas aún habiendo formas transitorias á la forma genuina, y respecto de las flores pequeñas que se hallan en los so- bacos de las hojuelas fasciculadas del tallo (sul)terraneo?) — 11 - debajo de la rosula, lo dicho en este sentido en la descrip- ción de la variedad ¡escudo-volcánica de la Viola Flos Idac. CARIOFILEAS 11. Mclandriuin Echciiarayi (Hieron n. sp.) M. ex affinitate i/, andicolí (Rohrb. syn. Silenc an- dícola Gil].), M. Cucubaloidis (Fen?.].), M. magcllanici (Fenzl.) etc. Herba perennis, csespitosa. Canlesperplureseradice, erecti, simplices, glanduloso-pubescentes, (maximi 8-9 cm. alti), basi vaginis albidis membranaceis foliorum vetustorum tecti. Folia inferiora conferta, sabrosulata,opposita, lanceo- lata, vel lineari-lanceolata, vel subobovato-lanceolata, in petiolum atteniiata, vaginantia, vaginis connatis, acutiuscula, vtd obtusiuscula, glanduloso-pubescentia (máxima 4-5 cm. longa, 4-6 mm. lata). Folia caulina pauca, minora, sessilia, basi connata, subvaginantia, lanceolata. Bracteae pari foliorum supremo simillimas, herbáceas, angustissime membranaceo-marginata?, glanduloso-pu- bescentes. Flores hermaphroditi, erecti, solitarii, ter- minales, vel bini. Calix ampliatus, su])campanulatus, extus glanduloso-pubescens; striis sub violáceo- viridi- bus, superne conjunctis rarius liberis; nervis commisura- libus plerumque ápice bipartitis, ómnibus venas reti- culato-raraosas, breves emittentibus, sed interstitiis membranaceis haud venoso-reticulatis; tubo calicis 7 mm. longo, laciniis 3 ^¡-i mm. longis, 3 mm. latis, ro- tundato-obtusis, suborbicularibus, glanduloso-ciliatis, margine membranaceis. Corolla alba (?), petalisannu- lo brevissime perigyno insertis, longiuscule unguicula- tis; unguibus 3-4 nervii-^, basi lanigeris, 1 cm. longis, — 12 - infi-a laminam 3 inm. Mis, obtuse auriculatis; lamina brevi, 4 mm. longa, B mm. ápice lata, bifida, laciniis obtusis, iuterdum subemar^inatis, reticulato-venosis-, appeuilicibus binis, parvis, obtusis. Filamenta stami- luim basi lanígera, circiter 12 nim. longa. Styli 5, ñliformes. Capsula subsessilis, unilocularis, oblongo-ovata (in speciminibus nondiun perfecte matu- ra). Semina dorso laciebusque plana, laevia, inmiar- ginata. Se halla esta especie nueva en las cercanías de Leonci- to; en Enero, con ñores y capsulas no enteramente ma- duras. Vl.Cerastinin arvensc {L. sp. cd. II. 628) syn. í?. vidga- tum var. periivianuin (Echeg. 1. c. p. 352 n. 7(i, non As-a Gray!) et C. Soratensc (Echeg. I. c. p. 352 n. 77, non Rohrbach!) var. caulibus, íbliis, pedunculis, pedicellis, calycibus plus minus glanduloso-pubescentibus, foliis, lineari- bus, vel lanceolato-linearibus, ápice cíilloso-mucronula- tis, obtusiusculis vel acutiusculis. Vd.Cerastmm nervosum (Naud. in Gay, hist. Chil. bot. I. 277. ex descr. 1. c. et ap. Rohrbach in Linnasa 37 p. 307). var. ramis fertilibus, 1-2 florigeris, bracteis margine albo-scariosis, rarius omnino herbaceis, staminil:)us 10. Aunque no tengo material de comparación, es decir, ejemplares auténticos, no me cabe duda que los ejem- plares coleccionados (en las cercanías de la Ciénega Lar- ga del Leoncito, en el mes de Enero con flores) pertene- cen á la especie mencionada, especialmente por la circunstancia de haber sido descubierta por el Sr. D. Cl. Gay en un parage relativamente no muy lejano ^Cuesta de los Patos). 14:. Acanthoni/ckia ramosissima (ílohrb. Fl. Bras. fase. 56 p. 249 tab. 56). — l:J var. a. (jcniíína ('Hohrb. 1. c.) (Echeg. 1. c. p. 352 n. 75). 15. PortulüCd iiraiidiflora (Camhess. in St. Hil. Fl. bras. mer. II. p. 138). (Echeg. 1. c. p. 35-2 n. 72). 16. Gruluimla bracteala (Gilí, iu Hook. Bot. Mise. III p. 332 n. 493). (Echeg. 1. c. p. 352 n. 74). Tiene el nombre vulgar: vinaur'dlu. ll.Calandrinia picta (Gilí. ap. Arn. in Edinb. Joiirn. nat. and geog. Scienc. 1831 p. 355). (Echeg. 1. c. p. 352 n. 73). AMARANTÁGEAS 18. Go)iip/irena piimila (Gilí. ap. Moq. in DC. Prod. XIII, 2, p. 400 n. 42 ex descr.) En territorio de la estancia de Maradona; en Enero con flores. Id.Eudvlus crassípes (Hieron.) syn. Ainarant/ius crassipes (Schlecht. Linn. 1831. p. 757. n.278), Sderopiis cr. í,Moq. in DC. Prod. XIII. 2. p. 271). Se. amara nthoides (Schrad. ind. sem. hort. Gotting. 1835. n. 7). (Echeg. 1. c. p. 345. n. 7). Stigmatibus 31 Tiene el nombre vulgar: bledo. 'O" QUENOPODEAS 20. Chcnopodium frif/idum (Phil. Viage Des. Atac. p. 221 n. 331 ex. descr.). Ch. annuum ex affinitate Ch. Vuluariao (L.) et C/i. carnosuli (Moq.), radico simplici, caule a basi ramoso, ramis longiuscuhs (in speciniine 10-20 cm. longis, pro- cumbentibus, obsolete striatulis, diñusis, parce ramo- - 14 — sis, furfuraceis. Folia alterna, petiolata (petiolo 1-7 mm. loiigo^, triangulari-vel subrhomboideo-ovatn, angulis laterali- hus interdum prominulis, lamina foliorum majorum 8-11 mm. longa, 5-10 mm, lata, obtusa, integerrima, furfuracea, incana, trinervla, nervis lateralibus subtus vix conspicuis. Racemi breves, subspicati, íbliolosi, densiflori. Calix farinosus; fructiferus imperfecte clausus, tubo ^4 mm. longo, laciniis V2 mm. longis, uninerviis, eca- rinatís, obtusiusculis. Semen fuscum, valde depres- sum, utrinque planiuscalum ^diámetro majore 1 nmi. longa, menore Y» mm. longa), nitidum, rugosiusculum, margine acutiusculum. Pericarpium tenue membra- naí'eum. El Dr. Echegaray ha recolectado esta especie en el Cerro del Tontal; en Enero, con flores y frutos. Aunque la descripción que dii Philippi (1. c.) es muy corta, no tengo duda que el nombre corresponda á nues- ti'a planta. 21. Clwnopodiurn ambrosloides (L. sp. 820). forma genuina (ex icone in Berg u. Schmidt, Offiz. Gew. tab. II c. ct descriptione a.p. Fenzl. Fl. brasil fase. V. p. 145). Tiene el nombre vulgar: palco y es abundante en la Provincia de San Juan; en Enero con flores y frutos. Soy de opinión que las especies Ch. ambrosioides (L.), anthelminticum (L.) y clúlense (Schrad.) no son mas que formas de una misma especie; y dudo que el prime- ro sea siempre anuo como está indicado en las descrip- ciones. 22. Halo'peplis Gilliessi (Gr. Symb. fl. arg. p. 38 n. 196) syn. Halocneni/um. americanum (Gilí. inHerb. Hook.). En las cercanías del Cerrillo de la Pdnconada; en Fe- brero con flores. — 15 ~ 23. Suaeda dwaricata (Moq. Chenop. en. p. 123 n. 8-, ui DC. Proel. XIII. 2. p. 156 n. 3). En las cercanías de la Rinconada; en Febrero sin flo- res, ni frutos. NIGTAGÍNEA 24. Oxybaphus campestris (Griseb. Plant. Lor. p. 39). (Echeg. 1. c. p. 345 n. 8). MALVÁGEAS 2b. Mcdcastrum sulfuren ni (Griseb. Symb. fi. arg. p. 43 n. 229j syn. Malva sulfúrea (Gilí, in Hook. Bot. Mise. III. p. 140). a) foliis subtus albo-nitentibus, leproso-siiuamatis. b) foliis subtus pube stellata incano-pulveiTilentis. Se hallan las dos formas en las cercanías del Parami- llo: en Enero con flores. '•) 26. Malvastrurii violaceum (Hieron). syn. Malva violácea (Phil. An. Un. Chil. 35 p. 162 n, 20 ex spec. authent.!). Stylis capitato-stigmatosis! Esta planta debe clasificarse según la característica que dan Bentham y Hooker (gen. I p. 201) de los géne- xoüjlalva y Maloastrum, como perteneciente al último por causa de la forma de sus estigmas. Tiene el nombre vulgar: malvisco morado y se en- cuentra en las cercanías del Paramillo; en Enero con flores y frutos. 27. Malvastrum prostatum (Hieron). syn. Malva próstata (Phil. An. Un. Chil. 35 p. 163 n. 23 ?, non Cav. diss. 2 t. 16 f. 3.) Foliorum lamina plicatula, cii'citer 8-12 mm. longa^ — IG — G-11 nuil, lata, petiolo 10-15 mm. longo, cálice 7-8 mm. longo, corulla, 10-12 mm. longa. La (lüscripcion que hace Philippi de su Malea p rostra- ta no corresponde enteramente á nuestra planta descri- biendo él las hojas de unos 20 mm. de largo ¡Cl peciolo iniduso ó noV), y de 15 nnu. de ancho y los petalos de apenas 10 líneas (no milímetros?) de largo. Toda la otra cara,cteristica corresponde bien á nuestra planta y creo por (ísta razón (lue, ó hay equivocación en la descrip- ción de Philippi, ó la planta sabe variar respecto al tamaño de sus hojas y de la corolla. El Dr. Echegaray ha recolectado esta ])lanta en el Paramillo; en Enero con flores y frutos. Tiene ella el nombre vulgar de Maluisco. 2S. Mali-aslnnri fcnellirm rHieron). syn. Malea tendía {Cuy. Ic. et. descr. pl. 5t. 422 f. 3. ex descr. ap. Barnéoud in Gay, hist. chil. l)Ot. I. p. 299 n. 7y et Malvastriiai pijtpnacam ^Griseb, Symb. íl. arg. p. 43 n. 22>, non As. Gr.Bot. Un. St. expl. exped. 150 in adnot.I Caulibuí% 10-20 cm. longis; stipnlis membranaceis, triangulari-linearibus, 4 nnn. longis, [ nnu. basi latís, saepius ápice 1-2 denticulatis, acutis. Aunque no está por el momento á mi disposición el imagen de Cavanilles (1. c.j, y la descripción de Barnéoud (ap. Gay 1. c.) no corresponde enteramente, estando des- critas allá las estípulas como setáceas. apenas tengo du- da que el nombre pertenezca á nuestra planta. Segu- ramente no le pertenece el nombre de Malcastrinn pi/;¡- maeina (As. G.) con que nombre el Señor Grísebach ha determinado algnnos ejemplares raquíticos y poco desen- vueltos, recolectados por el Dr. P. G. Lorentz y por mí en el Nevado del Castillo de la Provincia de Salta. El Dr. Echegaray la recolectó en el Paramillo: eu Enero, con llores y frutos. — 17 — 29. Sphaeralcea mendocina (Phil. An. Un. Chil. 21 1802. p. 892 11. 14.) syn. Malva mendocina (Phil. An. Un. Chil. 35 (1870) p. 162 n. 21) ex specimine authentico!) Ovarii lociüi 2-ovulaii! El Señor Philippi á cuya bondad nuestro Museo agra- dece un ejemplar auténtico de la especie, parece haber examinado un ejemplar fructífero de una Malva ó Mal- vastrum haciendo la descripción (1. c. 35 p. 163). Pues dice que «los carpidlos son ciertamente monospermos)). Los carpidlos del ejemplar original que nos ha man- dado y á que la descripción en el tomo 21 p. 392 de los Anales de ia U^niv. de Chile corresponde bien son cierta- mente biovulados y también bispermos, llegando á fecun- darse los dos óvulos. En la colección de Echegaray se hallan solo unos ramitos con flores: el lugar especial de la Provincia de San Juan, en donde las recolectó, no está indicado, ni tampoco el mes. EUFORBIÁCEAS 30. Euphorhia Schickendantzii (Hieron. n. sp.). syn. E. chilcnsis (Echeg. 1. c. p. 352 n. 79, non Gay!j Ipecacuanha ex afíhiitate E. portulacoides (Spr.) glabra, glauca, subramosa, caulibus e radicibus fusifor- mibus, crassiuscuhs( diámetro 2-4 mm. longa)pluribus, erectis vel ascedentibus. Folia subcarnosa, glauca, integra vel obsolete denticulata, caulina inferiora spar- sa, obovatü-spathulata, adbasim versus attenuata, sub- petiolata, ápice obtusa, vel subemarginata, interdum minute mucronulata, 1-3 cm. longa, communiter 2-5 mm., raiius 5-9 mm. lata; folia superiora ñoralia oppo- sita, sessilia, oblonga vel oblongo-linearia, semiample- xicauha, subconnata, obtusa, breviter mucronulata, 1-3 cm. longa, communiter 2-3 mm., rarius 4-6 mm. lata. Bol. Acad. IV. 2 — 18 — Inflorescentia e radiis binis pluries dicbotoma. Involucra pedunculata (pedunculis 1-4 mm. longis), glabra; lobi membranacei, truncati, subtridentati, den- tibus obtusiuscuJis, papilloso-ciliatis; gJandulae plerum- que 4, transverse oblongae, 7* ™"i- latae, ^¡i mm. loiigae, integrae vel margine obsolete subundnlatae, virides vel subfuscescentes. Flores masculi in series quinas dispositi, 2-3 in quaque serie, bracteolati, brac- teolis lineari-lanceolatis, ciliatis. Capsula longiuscule pedicellata ípedicello ad 6 mm. longo), caliculata (calicis lobis subulatis, circiter V¡2 mm. longis), profunde trisulca, 4 mm. longa. Styli basi vix connati. Semina subtriquetro-ovata, 272 mm. longa, IV2 mm. lata, cinereo-albicantia, glauco-marmoreo- maculata. El Señor D. F. Schickendantz ha sido el descubridor de esta especie nueva del género Ewphorbia: la ha reco- lectado en las cercanías del Fuerte de Andalgalá y de Yacutula, Provincia de Catamarca. Después la ha reco- lectado el Dr. Echegaray en las cercanías del Leoncito en la Provincia de San Juan. También la he encontra- do yo, en la Provincia de la Rioja en las cercanías de los Corrales, al pié de la Sierra Famatina. — Principia ella á florecer en el mes de Octubre. Sus frutos maduran desde Diciembre hasta Febrero. ol. Euphorbia Lorentzii (Mueller Arg. in Griseb. Sym. Flor. arg.p.t)2 n.347.) syn. E .hrasUiensis (Lam). var. Lorentzii (Mueller Arg. Plant. Lor. n. 133.) (Echeg. 1. c. p. 352 n. 81). 32. Euphorbia serpens (Kth. in H. B. nov. gen. et sp. 2, p. 41). (Echeg. 1. c. p. 352 n. 80). — 19 - GERANÍÁGEAS 33. Gerarmim albicans (St. Hil. Fl. bras. mer. p. 83). var. r/Ianduliferum (Hieron. n. v.). syn. G. fallax (Echeg. 1, c. p. 353 n. 87, non Steudel!) Caiilibus, petiolis, peduncnJis, pedicellis, calicibus, capsulae valvis glanduloso-pilosis, pilis reversis, vel patentibus. Un término intermedio entre esta variedad y la forma genuina, está representado en 'i. Erodimn cicutarium (Leman in DC. fl. ir, 4 p. 840) var. pilosum (Thuil, fl. p. ed. 2 p. 347).— (Echeg. 1. c. p. 353 n. 86). 35. Oxalis Eclmiarmji (Hieron. n. sp.) O. caespitosa, caulibus perpluribus, radicellatis (ra- dicellis simplicibus), e caudice crasso, carnoso, brevi. Folia confertissima, trifoliolata ífoliolis brevissime petiolulatis, obovato-cuneatis, vel subobcordatis, ápice truncato-rotundatis, vel subemarginatis, carnulosis, siccitate velut cellulosis, glaberrimis, 2-4 mm. longis, 2-4 mm. latis), longiuscule petiolata (petiolis 3-4 cm. longis, anguste alatis, filiformibus, tenuibus, basi sub- vaginantibus, supra vaginam subroseam, 4 mm. lon- gam, articulatis). Flores solitarii, pedunculati (pedun- culis petiolos subaequantibus vel lis paulo brevioribus longioribusve, filiformibus, anguste alatis, supra mé- dium bibracteolatis (bracteolis 1 mni. longis, linean- subulatis, membranaceis, glabris); post anthesin refle- xi, nutantes. Calicis folióla lineari-oblonga, obtusa, — 20 - integerrima, glaberrima, 4 mm. longa, Vji mm. lata. CoroUa lútea (?), circiter 8 mm. longa,; laciniis cmiea- tis, ápice 3 mm. latís, truncatis. Stamina 10; filamen- tis5; majoribiis 3 mm. longis; 5 minoribus 2 mm. longis; basi iii tubmuí 1 '/a mm. longum coalitis. Ova- ríum 5-lociilnre, loculis 2-,rarius 3-ovulatis. Styli 5, pilosi, circiter 3 mm. longi, stigmatibus capitatis. Conferatiir Oxalis miiscoides (Phil. An. üii. Chil. 35 (1870) p. 166). La descripci-ivi que da Philippi de su Oi-alis muscoidcs (1. c.) es ;fiiuy corta, y no corresponde bien á nuestra planta, pues describe aquel las hojuelas acorazonadas (!,\ sus pecíolos, el pedúnculo de las flores etc. como mas pequeños. No obstante, seria posible que nuestra planta, que forma un césped mas ó menos de 10 cm. de diámetro representa un ejemplar muy vigoroso de la especie de Philippi, En tal caso deberla borrarse el nuevo nombre que he dado á la planta recolectada por el Sr. Dr. D. Salle Echegaray en la Ciénega del Medio, cerca de Leoncito; en Enero con flores y frutos no maduros. ZIGOFÍLEAS 36- Larrea divaricala (Cad. ic. b. t. 560 f. 1). var. íoliis quam in forma genuina minoribus, lobis obhque ovatis, 4-7 mm. longis, 172-4 mm. latis, acu- tiusculis vel obtusiusculis. Tiene el nombre vulgar Jarrilla y se halla en las cer- canías de la Rinconada etc., en Febrero con frutos. 37. Larrea cuneifolía (Cav. ic. 6. t. 560 f. 2). (Echeg. 1. c. p. 353 n. 83). 38. Larrea nitída (Cav. ic. t. 559). (Echeg. 1. c. 353 n. 84). 01 39. Picctrncarpa tetracaiUha (Gilí, in Hook. Bot. Mise. III p. 167 n. 203). (Echeg. 1. c. p. 353 u. 85). 40. Bulncsia Retamo (Griseb. Plant. Lor. p. 58 n. 162, Symb. fl. arg. p. 75 n. 431). (Echeg. 1. c. p. 352 n. 82), POLIGÓNEAS 41. Rumex crispus (L, sp. 1. p. 476). Tiene el nombre vulgar de Ramoza; crece en las cer- canías de la ciudad de San Juíin; florece y tiene frutos en el mes de Enero. 42. Poiygonum avicula/re (L. sp. 1. p. 519). Dan á esta planta el nombre vulgar de Sanr/uinaria del Agua, y se halla en la Ciénega del Medio, cerca del Leoncito; florece y fructifica en el mes de Enero. LEGUMINOSAS 43. Lupínus tomcntosus (DC. Prod. II p. 409 n. 31). (Echeg. 1. c. p. 353 n. 93). Se llama vulgarmente: Manopla. 44. Glycijrrhiza astragalina (Gilí, in Hook. Bot. Mise. III p. 183 n. 264. sec. specimen in Phil. plant. mendoc, conf. Hieren., Sertum patag. in Bol. Ac. Nac. de Cieñe. III p. 342, n. 43). Tiene el nombre vulgar: Loca acia, y se encuentra en las cercanías del Paramillo; en Enero con flores. 45. Astragahis Orbignyanus (Wedd. Cbl. And. II p. 260 n. 13 ex descr.). En las cercamas de las Cabeceras del Leoncito; en Enero con flores. ^Q. Astragalus unifultus (L'Hérit. stirp, nov. 158). (Echeg. 1. c. p. 353 n. 94). Dan á esta planta el nombre vulgar de Yerba loca. 99 ^^^ 47. Asfmgolus dandcstiniis (Hieron.) syn. Phaca síandes tina (Phil. Viaje Desiert. Atac. p. 188 n. 74 ex descr.). En las cercanías del Paramillo; en Enero con flores. 4«. Astraíjalus Echegarayi (Hieron. n. sp.). Phaca perennis (?), rarnis herbaceis, striato-angula- tis, flavescentibus, parce sericeo-pubescentibus, (pilis plerisque albis). Folia imparipinnata, petiolata, cir- citer 9-12 cm. longa (petiolo circiter 1-272 cm. longo); foliolis 8-11-jugis ovato-oblongis, obtusis, submncronu- latis, breviter petiolulatis (petiolulo 1 mm. longo), ad 272 cm. longis, 4-5 mm.latis parce sericeo-pubescentibus (pilis albis); stipulis liberis, subtriangularibus, parce pilosis (pilis albis ve) nigris), vel glabriusculis, acutis. Flores in bractearum axil lis subsessiles, spicati, spicis circiter 2-3 cni. longis, lO-20-floris, pedunculatis, folio brevioribus (pedunculis pilis albis sericeo-pubescenti- bus, post anthesin recurvis, circiter 4-5 cm. longis). Bracteae sublineares, 272 mm. longae, V^ mni- latae, acutae, uninerviae, submembranaceae, pilis atris al- bístpie intermixtis pilosae. Calix subherbaceus, se- riceus (pilis atris albisque intermixtis), tubo 372 mm. longo, laciniis subtriangulari-linearibus, e basi circiter 1 mm. lata longiuscule acuminatis, ad 3 mm. longis. Corolla ochroleuca (ex sicco!). Vexillum erectum, ovatum, 1 cm. longum in unguem brevem attenuatum, 572 mm. latum, ápice obtusum, rotundatum; alae- oblongae, longiuscule unguiculatae (lamina 572-6 mm. longa, 172 mm. lata, ungue 372 mm. longo, 72 mm. lato), ápice oblique obtusae; carina alis breviore, obtusa, subincurva (petalorum lamina 2 mm. lata, circiter 5 mm. longa, ápice oblique obtusa, unguibus fere usque ad basim connatis, 4 mm. longis, partibus liberis vix 1 mm. longis, circiter V^ mm. latis). Ova- rium sessile, sericeum (pilis albis), mulíiovulatum (ovulis circiter 20). Stylus incurvus. Legumen - 2:3 — sessile, membranaceum, ochroleucum circiter 2^/2 cm. lougum, Vji cm, latuiii, reticulato-venosum , parce pilosum. Semina olivaceo-ochracea, reiiiformia. Se halla esta especie en las cercanías del Paramillo, en donde florece y tiene frutos maduros en el mes de Enero. 49. Adesmia subterránea (Clos, in Gay, hist. Chil. bot. 11 p. 192 n. 49). Planta de la alta Cordillera de San Juan. El ejemplar aludido que no tiene ni flores, ni frutos y que forma un césped de 25 á 30 cm. de diámetro, ha sido remitido al Dr. Echegaray en el año 1879 por D. Juan Fonseca, con la indicación que se Ua.ma con el nombre vulgar: Jarreta,— nomhvQ que dan generalmente los arrie- ros que pasan las Cordilleras á la Azorella madrepórica (Clos) y otras especies del mismo género, mientras que ésta, como también algunos aliados, tiene generalmente el nombre vulgar de Cuerno de Cabra. 50. Adesmia trijuga (Gilí. ap. Kook. et Arn. Bot. Mise. III. p. 191 n. 302). var. robustior (Hook. et A.rn. 1. c). syn. A. i/í/?c'j:flt(Echeg; 1. c. p. 353 n.91, non Griseb. Pl. Lor. p. 73 n. 218!). 51. Adesmia hórrida (Gilí. ap. Hook. et Arn. in Bot. Mise. III p. 191 n. 303). (Echeg. p. 353. n. 90). Tiene el nombre vulgar: Paiguen. 52. Caesalpinia (Sappania) praecox (R. et Pav. Fl. Peruv. t. 376 ined.; Hook. et' Arn. Bot. Mise. III p. 200 n. 368; Pil. in An. Un. Chil. 34. p. 159 n. 53). Forma floribus minoribus, leguminibus (immaturis), piloso-pubescentibus, ranmlis floramque peduaculis puberulis. — 24 — Tiene el nombre vulgar: Brea. Los ejemplares fueron recogidos en las cei-canías de la estancia Maradona, en el mes de Enero con flores y vai- nas no enteramente maduras aún; 53. ¡loffmannseggia Falcaria (Cav. ic. t. o92). Tiene el nombre vulgar de Porotillo. Los ejemplares fueron recogidos en el Pedregal del Pocito en el mes de Diciembre con flores y vainas casi maduras. 54. Iloffmannseggia andina (Miers Chil. v. 2 p. 532). syn. H. Falcaria var. andícola (Hook. et Arn. Bot Mise. III p. 209 n. 370) (ex det. Griseb. P). Lor. p. 81 n. 244 et specim. in Phil. Plant. Mend.!). En las cercanías del Leoncito; en Enero con flores. 55. Zuccagnia punctata (Cav. ic. 5 p. 2. t. 403). En las cercanías de la estancia Maradona, en el mes de Enero, con frutos. 56. Cassia apliglla (Cav. icón. 6. p. 41. t. 561). var. rígida (Hieren n. v.). ramis quam in forma genuina (sec. determ. Griseb. Pl. Lor. et Symb.) crassioribus, rigidioribus, subpmigenti- bus, rectis, epidermide pruinoso-farinosa (cerífera?) tectis, leguminibus, 7-11 cm. longís, 4-5 mm. latís; se- minibus nigrescentíbus, rugís sordide rosaceís marmo- reo-maculatís, compressis, utrínque ín centro macula plana, ovato-orbicularí (diámetro ad y 2 mm. longa) instructis. Esta planta, que abunda en las provincias de la Rioja, San Juan y Mendoza, y que propongo aquí como una variedad de la Cassia aphylla (Cav.), es quizas una espe- cie diferente de la forma genuina indígena de la Prc vin- cia de Córdoba, Catamarca, etc., que tiene generalmente ramos y ramítos mucho mas delgados y flexibles y me- nos punzantes. La planta del Oeste de la República - 25 - representa como un término intermedio entre ésta y la C. crassiramea (Benth.)- El Dr. Echegaray la ha recolectado en el Pedregal del Pocito, en Diciembre con frutos maduros. 57. Prosopis flexuosa (DC. Prod. II. p. 447. n. 9 ex descr. ap. Hook. et Arn. m Bot. Mise. III p. 203 n. 349). forma a) pinnis 8-12 jugis, foliolis distantibus, lineari- bus, obtusis, basi attenuatis minute puberulis. En las cercanías del Leoncito, en Enero con flores. ROSÁCEAS 58. Margyricarpus alatlis (Gilí, in Hook. Bot. Mise. III p. 305). syn. Tetraglochin strictum (Poepp. Fragm. synop. pl. phan. 26). En las orillas del arroyo de las Cabeceras cerca del Leoncito, en Enero, con flores; mas abajo en laQuebrada del Paramillo, en el mismo mes, con frutos. 59. Acaena Closiana (Gay, hist. Chil. bot. 11 p. 298 Atl. bot. tab. 21). (Echegaray. 1. c. p. 353 n. 92.). ONAGRARIEAS 60. Epilobium denticulatum (Ruiz et Pav. Fl. per et chil. t. 3, p. 78 tb. 314 ex determ. Griseb. Plant. Lor. p. 94, n. 297. et Symb. fl. arg. p. 131, n. 763). (Echeg. 1. c.p. 353. n. 89). forma foliis ovatis vel ovato-lanceolatis, circiter I72- 272 cm. longis, 5-13 mm. latis. 61. Oenothera oclorata (Jacq. coll. 3 p. 107). b. virescens (Ser.; Hook. exot. fl. t. 183). syn. Oenothera prostrata (Echeg. 1. c. p. 353 n. 88, non Ruiz et Pavón!) — 2í) — LOASEA 62. Jjjasa coronata (Gilí, ex Arn. in Ed. Journ. Nat. and Geogr. Science, 1831 p. 274). (Echeg. 1. c. p. 351. n. 71). UMBELÍFERAS Q2. Hydrocotyle bonariensis (Lam. dict. 3 p. 147). (Echeg. Le. p. 351. n. 64). Tiene el nombre vulgar: Tembladerilla. 63. Crantzia lineata (Nutt, Gen. pl. am. I. 177). var. b. subulata (Weddel, Chl. and. II. p. 202). s. V. inundata (Weddel, 1. c. t. 68. f. 2 et 3). Herba mínima, vix 2 cm. alta, foliis vix 2cm. longis, obtusiusculis; umbellis subsessilibus vel breviter pe- dunculatis (pedúnculo circiter 4-5 mm. longo), 3-5-flo- ris; involucro nuUo; floribus pedicellatis (pedicellis 3-6 mra. longis). Se halla en la Ciénega larga del Leoncito; en Enero con florns, 64. Azorella Gilliesii (Clos, in Gay, hist. Ghil, l)0t. III. p. 84 n. 10.). Syn. Bolax Gilliesii (Hook. Bot. Mise. III. t. 63. p. 325. n. 1). Foliis supremis saepius integris vel bifidis. En las cercanías de las Cuevas; en Enero, con flores y frutos no maduros. 65. Asteriscium polycephaluin (Gilí. et. Hook. Bot. Mise. I. 332). Syn. Dypterygia isatidicarpa (Prsl. msc); Mulinum isat. DC. Prod. IV. 80. Gijiiiophytum polijc. (Clos, in Gay, hist. chil. bot. ÜI. 102 t. 32). La imagen del fruto en el Atlas de Gay (tab . 32) y su descripción ( «trasaovado» ) no corresponden exactamen- te á nuestros ejemplares, cuyos frutos no son todavía — 21 — enteramente maduros, siendo mas ovales en su circuito; algunas pocas tienen forma intermedia entre la trasao- vada y la oval. Sin embargo no dudo que el nombre pertenesce á nuestra planta. Tiene el nombre vulgar: Yerba agria y se halla en las cercanías del Leoncito. Los ejemplares recolectados en Enero, tienen flores y frutos, todavía no enteramente maduros. ^Q.Muliniíin triacanthum (Gr. Pl. Lor. p. 106 n. 33^ ex spec. auth.!). var. muUíflorum (Hieron. n. v.). (Echeg. 1. c. p. 351. n. 65). Frutex ramosissimus, circiter 15 cm. altus. Folia trífida; inñma ramulorum abbreviata, 4-5 mm. longa, vaginantia, vix petiolata, laciniis I72-2 mm. longis, 1 mm. latis, oblongis, obtusis; superiora sensim accrescentía, suprema ad 2 cm. longa, vaginan- tia , (vaginis ciliatis) , petiolata (petiolo circiter 1 cm. longo), laciniis 6-8 mm. longis, spiniformibus. Umbellae circiter 14-20-florae, omnes in ramulisiya- 272 cm. longis terminales, pedunculatae (pedúnculo 5-6 mm. longo); involucri foliolis 5-6, basi connatis (tubo 172-2 mm. longo), laciniis elongato-triangularibus, acu- tis, 2-372 mm. longis. Flores exteriores pedicellati, involucri foliolis subaequantibus vel paulo longioribus; flores interiores breviter pedicellati vel subsessiles. Q7. Mulinum Echegarayi (Hieron. n. sp.). Eumulinum suff'ruticulosum, ex affínitate 31. mi- cropijlli, resinosum; caulibus, perpluribus, erectis vel ascendentibus, ad 15 cm. (in speciminibus) longis, ramosissimis, ramulis foliosis. Folia persistentia, sub- imbricata, glabra, 5-7 mm. longa, ima basi valde di- látate-vaginantia (vaginis sub-T-noi-viis, 3-5 mm. longis, circiter 6 mm. latis, coriaceis. iutus albidis, extus ju- — 28 — ventute viride-albescentibus, denique subochraceo-ña- vescentibus (nervis obscurioribus), margine submem- branaceis, longiuscule scarioso-ciliatis, vel denticula- tis, vel nudis), supra vaginam contracta, erecta et api- ce breviter trífida (laciniis circiter2mm. longis, l'/2 mni. latís, subobovato-ovallbus, coriaceis, crassis, api- ce obtusis miicronulatis, juventute interdum minute piliferis). Umbellae in ramulls terminales vel latera- les, siibsessiles, vel pedunculatae (pedúnculo 3-4 mm. longo), circiter 8-12 florae; floribus 2-4, extedoribus sterilibus, masculis). Involucri bracteae 5, inaequales, basi membranaceae,usque ad médium , vel si ipra coalitae uninerviae ápice subtriangulares, vel subulatae, inter- dum piliferae. Flores parvae. Sépala flavescenti-viridia, triangularía, minima, uninervia, conspicua, brevissime acuminata. Pétala uninervia, obtusiuscula, flavescenti- viridia, patentia, vel subreflexa, vix 2 mm. longa, circiter 7/8 mm. lata. Fructus (immaturus) in sicco subfuscescens; carpidia versus margines attenuata, alacformia. Esta nueva especie ha sido descubierta por el Dr. Echegaray al pié del Tontal y en la Quebrada del Para- millo. Tiene en Enero flores y frutos no enteramente maduros. QS/Midiimín integrifolium (Hieron. n. sp.). M. caespitosum (caespitibus 2-3 mm. altis) ramo- sissimun, ramulis procumbentibus, vel erectiusculis. Folia integm,, rígida, pungentia, glabra; spinoso-subu- lata, basi vagmantia, caesia, glabra; máxima 3 cm. longa; vaginis saepius parce ciliatis, ciliis longiuscu- lis, ad 4 mm. longis. Umbellae sessiles, pauciflorae (-10-florae). Flores exteriores masculi, interiores fér- tiles, brevius vel longius pedicellati (pedicellis ad ~ 29 — 72 cm. longis), saepius subsessiles. Involucri bracteae 5, albidae, subpellucidae, uninerviae, basi iisque ad médium connatae, inaequales (dentibus liberis, linea- ribus, 3-5 mm. longis, siib;icutis vel obtusiusculis). Calicis denles subtriangulares, miinervii, breviter acii- minati vel obtusiusculo-subtmncati. Pétala integra, obtusiuscula, uninervia, subpellucida. Fructus (in- maturas!) a dorso compressus, carpidla a dorso plana vel concaviuscula versus margines non attenuata, nec alaeformia. Se encuentra en las cercanías de las Cuevas. Los ejemplares recolectados por el Dr. Echegaray tie- tienen flores y frutos no maduros aún. La misma espe- cie he recolectado en la Cuesta del Peñón, al Sud de la Laguna Brava, en la Cordillera de la Rioja; faltan á mis ejemplares las cillas en las vainas de las hojas. Esta especie formará con otras dos quizas nuevas, re- colectadas en la Sierra Famatina, una nueva sección del género Mulinum. El carácter especial de ella coasiste en la falta de las alas en los carpidlos. 69. Apiíim Ammi (Urban in litt.) syn. Sisón Ammi (L. sp. 363? Jacq. h. vind. t. 200; Schult. syst. 6 p. 412 excl. Soban, et Poir. syn.) Helosciadium leptophijlLum (DC. mem. soc. genev. vol. 4; Griseb. Symb. fl. arg. p. 147 n. 378 ex parte!). (Echeg. 1. c. p.351. n. 66). IQ.Ammi Visnaga (Lam. dict. I p. 132). (Echeg. 1. c. p. 351.n. 67.). SANTALÁCEAS 71. Ar joña longifolía (Phil. An. Univ. Chil. XX. (1862) p. 405 n. 101). (Echeg. 1. c. p. 345n. 9.). - 30 - 72. Ar joña mínima (Hieron. n. sp.). A. herbácea, 2-4 cm. alta, radicellis , caule erecto, diviso, saepe basi subpurpurascente. Folia glabra, crassiuscula, subenervia (fasciculis vasorum mesophyllo immersis, in utraque pagina in- conspiciüs), linearía, 5-14 mm. longa, 1-1 V2 mm. lata, inferiora saepe obtusa; superiora acuta mucronata (mucrone albescente). Spicae 2-4 florae, bracteae flo- res fu) erantes late ovatae, subuninerviae, breviter acu- minatae, mucronulatae 5 nnn. longae, 872 mm. latae, glabriusculae, ápice solummodo ciliatae. Bracteolae liberae, ovatae subacutae, SV^mni. longae, 174 mm. latae, intus glabnie, extus pilosae, marginibus ciliatae, uninerviae, subreticulato-venosae. Perigonium lilaci- num (?), 5-fidum, tubo 9 mm. longo, superno paulo amplíate, extus parce piloso-pubescente, intus glabro, laciniis ovatis 274 mm. longis, I72 mm. latis. acu- tiusculis, ápice calloso subpenicellatis, extus piloso- pubescentibus, intus (exceptis penicillis pilorum flavo- rum in medio partís basalis) glabris. Antherae vix 1 mm. longae, in sicco, sordide ochroleucae. Stylus filíformís, stigmatibus 3, brevibus, staminum origínem non attíngentibus. Se encuentra esta especie diferente de las hasta ahora descritas, en la Ciénega del Medio, cerca del Leoncito, en Enero, con ñores. LORANTÁGEA 73. Loranthus verticülatus (Ruiz et Pav. fl. per. 3 p. 47). Parásita de árboles y arbustos en las cercanías de la Estancia de Maradona. Principia á florecer en el mes de Enero. RUBIÁCEA 74. Galium Richardianum (Endl. in Walp. Rep. II p. 459 n. 50 ex deter. Gríseb. Pl. Lor. p. 112 n. 372). — 31 — syn. Rubia Richardiana (Gilí, in Hook. Bot. Mise. III. p. 362 n. 631). (Echeg. 1. c. p. 349 n. 42). Forma internodiis elongatis, 1-2 cm. longis, ibliis 4-5 mm. longis, 1 mm. latis, pedunculis circiter 7-8 mm. longis. GALICÉREAS 75. Boopis (Nastantkus) sanjuanina (Hieron. n. sp.). A', radico ftisiformi, crassa, scapis brevibus radi- calibus, plurimis (in specimine uno 36) caespitosus. Folia radicalia, longe petiolata, 272-4 cm. longa; petio- lo lamina triplo vel qiiadruplo longiore, 3-vel obsoleto 5-nervio, dilatato, 2-3 mm. lato, lamina circumscriptio- ne ovato-oblonga, vel subobovato-oblonga, crassa, se- mipinnatifida-, pinnis utrinqiie 4-5; laciniis ómnibus obtusis; lóbulo terminali subobovato, integro vel sub- crenato-bi-trifido; laciniis lateralibus superioribus (2-3) margine inferiore uniauriculatis, rarius integris, obova- to-oblongis. vel subcuneatis, basi subangustatis; infe- rioribus (2-3) sublinearibus, vel cuneato-linearibus, nervis in mediana sub 3, conspicuis, in pinnis incons- picuis, vel solummodo uno conspicuo. Capitulum axis primarii sessile, majusculum (in speciminibus diámetro 1-1 V2 cm. longa), involucri bracteis circiter 10-12, connatis, ápice subtri angular! bus, obtusiusculis; capitula lateralia minora (diámetro 5-6 mm. longa); interiora in axillis foliorum subsessilia; exteriora brebriter pedunculata, pedunculis vix 1 cm. longis, unifoliatis folio petiolato, lamina petiolo aequante); involucri bracteae capitulorum lateralium exte- riorum circiter 7-8, interiorum 4-5 connatae, laci- niis subtriangularibus vel oblongo-ovatis. Paleae nu- llae. Corollae tubo circiter 3 mm. longo; glandulis fauci insertis nullis. — 32 — Se encuentra esta especie en las márgenes del Arroyo de la Ciénega del Medio, cerca del Leoncito; en Enero con flores y frutos. Es muy posible que esta especie; como igualmente to- das las de Nastanthus propuestas por Miers (Contr. 11 p. 13-17), no sean más que diversas formas de una mis- ma especie muy variable, que en tal caso deberla tener el nombre de Boopis scapigera (Remy, in Gay hist. Fl. chil. bot. III p. 250) por ser éste el mas antiguo dado á una de las formas. El Señor Weddell (chl. and. II p. 7), que es de esta opinión une á ella como variedad el Nas- tanthus ventosus (Miers) syn. Calycera ventosa (Meyen). Los Señores Bentham y Hooker (gen. II p. 162) están conformes en este sentido. No obstante, líe propuesto nuestra forma como especie iiueva, teniendo á mi dispo- sición la literatura necesaria, pero sin contar con suficien- te material de comparación, sin el cual no se podria re- solver quizas esta cuestión; y siendo muy diferente el hábito en las imágenes de algunas de las especies pro- puestas por Miers, he resuelto proponer tamicen nuestra planta como otra especie diferente de las otras. 76. Boopis anthemoides (Juss. Ann. Mus. II 350.). var. andina (Hieron. n. v.). (Echeg. 1. c. p. 345 n. 10.). Sufírutex 15-20 cm. altus, basi ramosus, caulil)us plurimis, erectis, angulato-striatis, ramulosis. Folia rigidula, crassiuscula; inferiora circiter l'/j cm. longa, spathulato-linearia, ápice plus minusve trífida, vel 1-2-denticulata; cauhna pleraque ad 3 cm. longa. pinnatisecta, laciniis circiter 1 mm. latís, ad 1 cm. Ion- gis, bijugis cum impari. rachi (lineari, circiter 1'/-' mni. latae) subapproximatis, linearibus, pugenti-mucrona- tis. margine subrevolutis; folia suprema minora, lineíi- ria, ápice trífida, vel 1-2 denticulata. Capitula in ra- — 33 — mis teraiinalia, solitaria, ¡¡eduuculíita, (iiiteriiodio Ínter folium suprcmumet capitulum longitudiiiem 4cm. attin- gente).Involucrumgamophyllum, circiter 1 cni. longum, late campanulatLim. viride, basi pallido-vii idi subinem- branaceum,fere ad médium 8-10 fidum. laciniis subinae- qualibus, elongato-triangularibus. acutis, piingenti-mu- cronulatis, inteV^ris vel basi denticiilatis, iininerviis. Paleae lineari-subulatae vtdlanceolato-lineares, acutae, circiter 5 mm. loiigae, vix '/s mm. latae, virides. Dentes calicini virides, denique submembranacei, ovati, ápice longiuscule pugenti-miicronati, aristulati, plerique infra aristam utrinque l-(rarius 2-) denti'^ulati, 2 mm. longi. vix 1 mm. siipra basim lati. Corollae tubus circiter 6-8 mm. iongus, laciniis l'/o mm. longis. Achaenium (in flore!) circiter 3 mm. longum. En las cercanías del Leoncito; florece en Enero y Fe- brero. La misma variedad he recolectado yo en l;i Sierra Famatina. Ella es mas aliada á la Boopís riaidnla ^ (JMiers.) — la que juzgo ahora con Grisebach (Symb. fl. arg. p. i6l. n. 962) igualmente como variedad de la Boopís anihemoidcs (Juss)!--que á la forma genuina. 77. Calycera siiiuata (Miers, Contr. 11. p. 35 tab. 50, B.) Tiene el nombre vulgar: Bailabncn-^ crece en el Cerro del Tontal y florece en el mes de Enero. SINANTEKEAS 79. Yernonia saiicifolia (Gilí, in Hook. et Arn. Comp. Bot. mag. 1. p. 237). (Echeg. 1. c. p. 345 n. 11). 80. Erige ron Phílippii (Schultz Bip. in sched.pl. exsicc. chil. Phílíppí n. 51. ex descr. ;ip. Weddell Chlor. and. I p. 192 No. 6). Se halla es 1 is cabeceras cerca del Leoncito; en Ene- ro, con flores. Bol. Acaii. IV. ;5 — 3-1 Si. Erige ron honariensís (L. ex determ. Griseb. S^^mb. fl. arg. p. 176 n. 1048). En las cercanías del Leoncito; en Enero, con flores y frutos. S2.llysteroiiica jasionoides (Willd in Gesellsch. n;it. Fr. Berl. Mag. 1807, 140). , (Echeg. 1. c. p. 319 n. 41.). SS. Gríndelia pulchella (Dunal, inem. mus. h. n. Par. 5p.51t. 2). (Echeg. 1. c. p. 345 n. 12). 84. Baccharis Pingraea (DC. Prod. Y. p. 420 n. 159 ex det. Griseb. Pl. Lor. p. 126 n. 431 et Syinb. flor. arg. p. 180 n. 1076). syn. Bacc/iaris Longipes (Echeg. ]. c. p. 345 n. 16, vix Kunze in Poepp. coll. 2. n. 104.)- Speciiiiina hermaphrodita . 85. Baccharis angulata (Griseb. Symb. fl. arg. p. 180. n. 1077). var. andina (Rieron, n. v.) Basi frutescens, vix 10 dm. alta, ramis herbaceis, brevibus, circiter 4-5 cm. longis, farinoso-pubescen- tibus. Folia plera( pie linearía, acuta, integerrima, gla- briuscula, ad 1-1 '/2 cm. longa. circiter 1 mm. lata; paucn subcuneato-linearia, acumínati, ntrinque 1-3- denticulata. Capitula femínina omnia in ramis herba- ceis, primariis terminalia, solitaria, diámetro circiter 8 mm. longa. Involueri squamae iís formae ge- nuinae simillimae, interiores cuxiter 6 mm. longae 174 mm. latae, floribus femineís exsertis. Achaenia fusco - nigrescéntia, glabra, 4 mm. longa. Pappi setae 7-9 mm. longae, stylum superantes, tenues, sordidae, scabriusculae. Corolla 3 mm. longa. — 35 — truncíita, filifomiis. Stylus circiter 6 luni. longus (rnmis circiter l'/a miii. longis). Capitula lierma- phrodita Se halla en el Cerro del Tontal: en Enero, con flores. 86. Baccharis calUprinos (Griseb. Plant. Lor. 129 n. 444.). (Echeg. 1. c. p.346n. 17). Specinien hermaphroditum. Capitula 30-40 ñora (numeris in capitulis examinatis 34, 35, 36, 37, 38, 40). Pedicelli circiter 2-5 mni. longi, bracteolati, brac- teolis sublanceolatis vel subulato-triangularibus, sub- sessilibus, herbaceis, 1-2 mm. longis. Involucra cam- pnnulata; bracteae involucri sub-6-7-seriatae; intimae elongato-lineares, 5 mm. longae. 1 mm. latae. exterio- res gradatim minores, extremae breves, 1 mm. lon- gae, vix 1 mm. latae, subrotundato-ovatae, pallido- virides, subcarinatae, uninerviae, dorso ad apicem versus flavo - íüscescentes, margine angustissime pellucido - membranaceae, eroso-ciliatae. Recepta- culum planum, foveolatum. Corollae flavo-albi- dae, tubo 3-3Y2 nnn. longo, laciniis 2 mm. longis, Y2 mm. latis. Pappi setae subuniseriatae, circiter 5 mm. longae, filiíbrmes, ápice scabrae, incrassa- tae. Antherae basi subobtusae vel subemarginatae, ápice conectivo producto mucronato-appendiculatae (appendicula V2 mm. longa, acuta), thecis 172 mm. longis. Styli bifidi, ramis 7* mm. longis, achaenio subabortivo nrinimo, vix V'e víim. longo. Tiene el nombre vulgar C/iilca dulce y se halla en el Pedregal del Zonda; en Enero, con flores. 87. Baccharis ^nicrophijüa (Kth. in H. B. Nov. gen. et. sp. IV. 53. DC. Prod. V. p. 407 n. 65). Forma foliis plerisque 3-5 dentatis; paucis subinte- gris.. capitulis mnjusculis. — 8í; — Se halla en la Quebrada del Piíraniillo; en Enero, con flores y frutos. El Dr. D. Saile Echegaray ha recolec- tado ejemplares de ambos sexos. 88. Bacchdris Grisehachií (Hieron. n. sp.). syn. B. (jnaphalioides (Griscb. Synib. fl. arg. p. 183 n. 1102, nec Spr. syst. 3 p. 461, quae est Luciíia acu- tifolíaex Schlechtendahl. conf. DC. Prod. Vil p. 282; nec DC. Prod. V. p. 415 n. 119). B. polifolia (Echeg. 1. c. p. 345 n. 13 et 15, non non Gr. Pl. Lor. p. 128 n. 440). B. ex sectione Discolormn et ex affinitate B. poli- foliae (Griseb.), B. kdifoliae (H. B. K.), B. revolutae (H. B. K.) etc. Frntex '¡-¿A m. altus ramosus, ramis albo-ochraceis, substriatis, juventute arachnoideo-to- mentosis, denique glabriusculis. foliosis. Folia alter- na, rigidula, subcoriacea, crassula, uninervia, avenía, patentia, linearla vel subcuneato-linearia, I-272 cm. longa, l-2nnn. lata,ad basim versus subangustata, ápice obtusa, vel brevis&ime acuminato-mucronulata, supra juventute parce arnchnoidea, denique glabra, viridia, interdum glutinosa, supra (ñervo mediano inconspicuo) unicanaliculata, bubtus (marginibus revolutis glabris nervoque mediano crasso, subcanaliculato, glabriuscu- lo) subbicanahculat-i (canahculis dense cano-tomento- sis). vngmantia (vngina subsemiamplexicauli, brevi, 1 mm. longa, Vji mm. lata, subcornea, persistente). PeduncuJi esunmiis axiUis monocephali, foho fulcran- te breviores, vix 1 cm. longitudine attingentes, albo- tomentosi, saepius subglutmosi, ebracteati, rarius unibracteolati (brncteola tomentosa, subulata, vix l'/a nnn, longa), in corymbum simplicem dispositi. Involucra cnmpanulata; bracteae sub 4 seriatae, nervosae, albo-virides, vel ad apicem versus saepius purpurascentes, margine subpellucido-membranaceae, 37 parce ciliolatae, obtusiusciüae-, intiniae exterioribus longiores. lineares, capitulorum femineorum circiter 5 mm., herma phroditormn 4 mm. longae, 1 iiiiii. latae. glabriusculae, ápice barbellatae; exteriores gradatiin minores, extremae ovatae, 2-2Y2 mm. longae, IV* mm latae. Capitula feminea circiter 35-7c-flora. (numeris in f-apitulis examinatis 39. 43, 53, 59, 61, 75); hermaphrodita (achaenio abortivo sterilia) circiter 15- 40-flora (numeris 14, 18, 20, 24, 26, 38). Receptacu- lum convexum vel subconicum. foveolatum, foveolo- rum marginibus ñmlirinto-laceratis subpaleaceum. CoroUa sordide alba, floris hermaphroditi 4 mm, long;^, usque ad médium 5-fida, floris feminei 3 mm. longa. Stylus floris utriusque bifidus. ramis '/2 mm. longis, ñoris feminei tenuibus, filiformibus, herma- phroditi crassiusculis. Achaenia ñoris feminei 2-3 mm. longa. glabriusculn, sub 5-costata. costis parce glandulis vel papillis minutis, sessilibus adspersis; achaenia ñoris hermaphroditi sterilin, abortiva, brevis- ssima. Pappi setne sordide albae vel subrufae, sca- briusculae, 3-4 nmi. longae. ñoris feminei biseriatae, rigidae, ñoris hermaphroditi ñexuoso-tortuosae. No conozco la especie B. gnaphalioidcs (DC); no obs- tante me parece seguro no ser idéntica con nuestra planta, pues no corresponde á ella perfectamente la descripción que da De CandoUe (en el Prod. V. p. 415) de su B. gnaphalioidcs. A más, nuestra planta es tam- bién característica de parages bastante elevados (la encontré también en la Sierra de Famatina, cerca de un punto llamado la Encrucijada (aproximativamente 2800 metros sobre el nivel del mar) y cerca del Corral Colo- rado (aproximativamente 3200 metros) y con el Dr. Lorentz en la Cordillera de Jujui entre El Ojo de Agua y la Abra de las Cortaderas y en la Quebrada Honda del terriiorio de Tarija (aqui una variedad que llaman con el — 38 — nombre vulgar: Quinchamal, con cabezuelas femeninas cuyos receptáculos tienen forma de cono obtuso, de 2 mm. de altura), y seria curioso que vuels^e la misma planta á hallarse en la provincia del Rio Grande del Brasil, en donde la planta de De CandoUe es indígena. Podrin más bien ser idéntica á la B. ledifolia (H. B. K.) á la que se atribuye un estilo de las flores estériles de forma de clava (en Weddell, Chl. and. I p. 174.). El Dr. Echegaray ha recolectado nuestra planta en la Quebrada del Leoncito; en Diciembre, con flores. 89. Hetorotlialamus spartioides (Hook. et Arn. Journ. ot Bot. III. p. 42 11. 1105.) syn. Baccharis sarophora (Phil. in An. Univ. Chil. 35. p. 180 n. 119 ex spec. authent. in Pl. Mendoc.!). (Echeg. 1. c. p. 345 n. 14). Tiene el nombre vulgar: Pichana. 90. Tessaria absintliioides (DC. Prod, V. p. 457), syn. Bac- charis absinthidides (Hook. et. Arn. bot. Beech. p. 57). (Echeg. 1. c. p. 340 n. 18). La llaman vulgarmente: Pajaro bobo. 91. GnaphaliiDii lutco-albuin (Linn. sp. 1196), syn. G. chei- ranlhifoliuDí (Echeg. 1. c. p. 347 n. 24, non Lam. et synon.!). Forma incana robusta 37-2 dm. alta; f 'bis radicali- bus caulinisque inferioribus oblongo-spathulatis, obtu- tusis, saepius sphacelato-mucronulatis; caulinis su- premis paucis, oblongo-linearibus, obtusiusculis, vel acutiusculis. 92. Ambrosio artemisiae folia (L. sp. 1401 ex determ. Gri- seb. Symb. fl. arg. p. 189 n. 1152,). En las cercanías de Papa-Gallos en Diciembre con flores. -- 39 — 93. Viymera GiUiesii (Hieron.), syn. Leighia (iiliwsi'i (Hook. et. Arn. in Jouin. of Bot. III. pi 313 n. 1137), Helianthus heteropappus (Gilí, mscr.) ex descr.; et Ce- phnlophora radiota (Phil. in Pl, Mendoc. ex parte, ex specimine authent.! non Less.). Tiene el nombre vulgar de Maravilla y se halla en la ' Quebrada del Paramillo, en Enero con flores, 94 Verbesina encelioides (sec. Bentb. et Hook. gen. II. p. 380), syn. Ximencsia ene. (Cav. icón. 2. p. 60. 1. 178).— (Echeg. 1. c. p. 349 n. 21). Forma foliis inferioribus , superioribus ovatis, vel ovali-oblongis, supremis sublineari-lanceo- latis, grosse serratis, supra parce pilosis, subtus valde cano-villosis; achaeniis disci villosiuscuLis, undique alis cinctis; alis opncis, lobis triangularibus acutiuscu- lis, cibatis, margine inferiore aristulatis. Soy de la misma opinión que el Dr. Echegaray que esta juzgando la Ximencsia encelioides (Cav.), la X. mi- croptera (DC. Prod. V. p. 627) y la Verbesina scabra (Phil. Sert. mend. in An. Un. Chil. 35 p. 186 n. 144, non Bentb.!) como formas de una misma especie. Igualmente soy convencido que también la Verbesina heterosperma (Griseb. Synib. fl. arg. 193 n. 1175 ex sp. auth.!) pertenece al mismo ciclo de formas. Nuestra forma sanjuanina es muy aliada á la V. scabra (Phil.), de la que nuestro Museo posee un ejemphn- auténtico, tiene el mismo habito, forma igual de las hojas etc., pero es diferente por sus aquenios que tienen sus alas á todo el rededor. 95. Bidens huinilís (H. B. K. nov. gen. et sp. IV 234). var. tenuifolius (Sch., ex Griseb. Symb. fi. arg. p. 198 n. 1197) syn. tí. hu milis y;íy. macrantlms (Griseb. Pl. Lor. p. 138 n. 485) tí. chilensis (Phil. An. Un. Chil. 35 — 40 - p. 186 No. 14i non DC!) var. (jrandiflnra (Phil. ex spec. autñentico!). (Echeg. 1. c.p. 346n. -JO). 96. Bidcns leucantlius (Will-l. sp. 3. p. 1282). (Echeg. l.c. p.;346n. 19). dl.Gaillanlia toiUolensis (Hiei'oii. n. sp.). G. ex affinitate G. scabiosoídis (Benth. Hook.). Herba perennis, 5-15 cm. alta, subacaulis, caespito sa, vel caulibus pluiibus, brevibus, ascendentibus basi ramosa. Folia inferiora caulina subalterna, vel internodiis brevissimis subrosuiato-fasciculata, parce pubescentia, semipinnatisecta, ainbitu oblongo-linearia, longitudinem maximam 6mm.attingentia, y2-lcni.lata, in petiolum basi vaginaníeni, semiamplexicaulem atte- nuata; lobis utrinqne 3-5, ovatis, vel ovato-oblongis, obtusiusculis, vel subacutis integris, vel margine inferiore altero subuniauriculato-denticulatis, lobo terminali integro, vel iitrinque bidentato, obtusiuscu- lo, mucronato. Scapi in quoque caule plurimi, in par- te inferiore foliosi, foliis paucis (2-4), in parte superiore (internodio elongato, circiter 6-8 cm. longo) nudi, infra florem densius pubescentes, compressi, taeniaeformes, striati, saepius torti. Capitula in scaporum ápice solitaria, majuscula (diámetro 1-2 cm. longa), homo- gama. Involucri bracteae lanceolato-ovatae, acutae vel longiuscule acuminatae, subaequales, circiter 8-10 mm. longae, infra mediun 3-4 mm. latae, herbaceae, virides, jnxta margines (anguste membranáceos, Ínte- gros, vel minute laciniato-denticulatos) saepius vio- laceo-purpurascentes (in sicca!). Flores omnes discoi- dei, hermaphroditi. Pappuse paleis 9-11, uninerviis, utrinque infra nervum in aristam productum bidentatis, scariosis, circiter 6 nmi. longis (incl. arista 2-272 mm. longa), CoroUa flavo-purpurea, 5-fida, 8 mm. longa, — 41 — tubo flavescente siipra basim val de contracto, 7 mm. longo, laciniis purpurascentibus, subtriangularibus, dor- so (pilis brevibus, articiüatis) hirsutis, 1 mm. longis. Styli ápice brevissime penicillati. Achaenia dense viJJosa, pilis subochraceo-fuscis. Se halla esta especie nueva en el Cerro del Tontal, en Enero, con flores. Como á más de la forma discoidea en las especies aliadas G. scabiosoides (Benth. et. Hook.)y G. Doniana (Griseb.), hay otra que tiene flores femeninas periféricas (del «radio») y hermaproditas del centro, creo que debe existir igualmente la forma heterógama de esta nueva especie de la que el Sr. Dr. D. Saile Echegaray ha traí- do solamente ejemplares con capítulos homógamas. 98. Gaillardia Doniana (Griseb. Pl. Lor. p. 140 n. 497.). (Echeg. 1. c. p. 847. n. '>3). 2d.Hymeiu(therum Belenidium (DC. Prod. VII p. 292). Ha sido recogida por el Dr. D. Saile Echegaray en im parage de la provincia de San Juan, no indicado espe- cialmente. \{)O.Anthemis Cotula (L. sp. 1261). (Echeg. ]. c. p. 347 n. 23). Tiene el nombre vulgar: ■manzanilla. 101. Artemisia Mendozana (DC. Prod. VI. p. 105 n. 68). var. foliis superioribus integris, acuminato-mucrona- tis, inferioribus triñdis, lobis lateralibus hinc inde bi-trifidis, laciniis mucronulatis, vel subobtusis, foliis ómnibus sericeis, subtus saepius in ñervo mediano marginibusque, glabriusculis; caulibus sericeis, angu- latis, angulis glabriusculis. — 42 — Tiene el nombre vulgar: ajenjo y se encuentra en la Quebrada del Leoncito; en Enero, con flores. 102. Artemisia Echegarayi (Hieron. n. sp.). Abrotanum sufíruticosum, circiter 72 m. altum, ramosum, ramis subarcuate ascendentibus, vel sub- procumbentibu-;, sericeo-tomentosis, denique perider- mate cinéreo tectis, striato-rugosis, nodulosis. Folia utrinque sericeo-incana, radicalia , caulina petiolata, petiolo lamina longiore, ad 1 cm. longo; lamina trífida; laciniis subaequalibus, circiter 6-7 mm. longis, saepius bi-vel trifidis, linearibus, obtusis. Ca- pitula magna (diámetro 5-6 mm. longa), globosa, racemosa, in axillis bractearum (integraiiim vel trifi- darum, foliisíiue simillimarum) solitaria, vel bina ternaque, subsecunda, nutantia, pedanculata (pedún- culo vix 7* cm. longo), vel subsessilia, circiter 35-50- flora (floribus radii 8-14). Involucrum campanulato- globosum. Involucri bracteae subaequales, dorso sericeo-pilosae, oblongae; exteriores anguste, interio- res latius margine membranaceo-hyalinae, laciniato- denticulatae, vel ciliatae. ápice ol)tusae, circiter 372 mm. longae, 2 mm. latae. Cor olla lútea. Se halla este arbustito en la Quebrada del Leoncito; en Enero, con flores. La misma especie he coleccionado en la Sierra Fa- matina, cerca de un punto llamado la Encrucijada. 103. Senecio psam mophibis (Griseb. Pl. Lor. p. 141. n. 507). (Echeg. 1. c. p. 348 n. 2"). lOi. Senecio alhicaulis (Hook. et Arn. Journ. of Bot. III p. 344. ex parte)? S. fruticosus, incano-tomentosus, caulibus pluri- bus a basi ramosus; ramis albidis patentibus, sub- - 43 — striatis, 74- 7-' m. altus. Folia scssilia, l'/a-O oin. longa, 2-4 mm. lata, obtusa, subcarnosa, plana (mar- ginibus vix revolutis, ñervo mediano subtus promi- nulo), lineada, integerriraa, velpinnatifido-lobata, vel dentato-lobata, laciniis utrinque 1-3, linearibus 2-10 mni. longis, circiter 1-1 72 mm. latis. obtusiusculis. Corymbr compositi, ramis patentibus multicepbali. Capitula radio deficiente homogama, 17-30-flora, in ramis solitaria, bina ternave, pedunculata, (pedúncu- lo saepius sulielongato). Involucra cylindraceo-cam- anulata;bra.cteis 8-13, linearibus, Omm. — 1 cm. longis. 1 mm. latís, ápice acutis, penicillatis. saepius sphace- latis in parte mediana herbácea, arachoideo-tomen- tosa. incana, marginibus straiuineo-flavescentibus. CoroUae albido-flavescentes, vel lilacinae, tubo 8-9 mm. longo, laciniis vix 1 mm. longis. Achenia papilloso-villosula. Pappi setae albae, basi subinte- grae, ápice scabriusculae. El Dr. Echegaray ha traido esta especie de la Pro- vincia de San Juan. No está indicado en la etiqueta el lugar especial donde la recolectó (en Enero (?) con flores y frutos). Además tengo la misma especie en diversos ejemplares recogidos por el Señor D. F. Schickendantz en las cercanías de Yacutula (dep. Belén), en la Pro- vincia de Catamarca etc. Parece, desde luego, que no es muy rara y se halla esparcida al pié de las Cordille- ras y sus prolongaciones. Por esto, como igualmente, porque la corta descripción del Senecio albicaulis (1. c.) corresponde bien á nuestra planta, he dejado á ella este nombre, mientras queche propuesto deno- minaciones diversas para dos otras especies aliadas de Patagonia (con Sert. pat. in Bol. Acad. Nac. cieñe, exac. III p. 35 7, 358 n. 90, 91.),que quizas pertenecen á las formas que unen Hooker y Arnott bajo un nombre común, pero que en realidad son muy diferentes. — 44 — 105. Senecio salsus (Griseb. Pl. Lor. p. 142 n. 509!). Capitula heterogama (nec discoidea!). Corollae florum feínineorum radii (lamina mínima, vix cons- picua) subtubiformes, circiter 5 mm, longae. Achae- nia papuloso villosula (nec glabra!), var. involucri bracteis 11-13, quam in forma genuina angistiotibus 1-1 72 mm. latis. — -(Echeg. 1. c. p. 348 n. 27). La descripción que da Grisebach (1. c.) no correspon- de enteramente á los ejemplares auténticos (colecciona- dos por el Dr. P. G. Lorentz), que se guardan en nues- tro Museo Botánico. 106. Senecio scctilis (Griseb.. Pl. Lor. p. 142 n. 510!) Senecioiii Gilliesia/io (Hieron. Bol. Ac. Nac. III p. 356 n. F9.) valde affiuis, radiatus (ut specimen authenticum 1. c. descriptum!); lamina lingularisñorum radii ovata, ápice truncata, tridentata, circiter 5 mm. longa, 174-274 inm. lata, sed achaeniis parce pa- puloso-villosulis vel subglabriusculis ! Senecio sectilis var. radiatus (Griseb. Symb. fl. arg. p. 204 n. 1248) in monte Hierra Achala de Córdoba habita ns est altera species, quae valde differt! var. íbliis inferioribus ramulorum subcuneato-trifidis, superioribus pinnatisectis, segmentis 2-3-jugis, inte- gerrimis, involucri bracteis 11-13, achaeniis densius papilloso-villosulis. (Echeg. 1. c. pag. 348 n. 26). 107. Senecio denñssus (Phil. An. Un. Chil. 35 (1870) p. 181 n. 125 ex descr.). Foliorum laciniis subobtusis; capitulis 20-45 floris; involucri bracteis 13-14, basi breviter connatis, 7 mm. longis, circiter I72 mm. latis; achaeniis, (in flo- ribus) glabris. — 45 — La descripción que da Pliilippi (i. c.) corresponde regularmente á nuestra planta. Se halla en las cercanías de las Cuevas; en Enero, con flores. 108. Senecio criophytnn (C. Remy, in Gay. hist. Chil, bot. IV p. 159 n. 4'2 ex descriptione). S. radiatus, arachnoideo-lanatus (lana nivea, deni- que decidua), fruticosiis, circiter 2 dm. altus, ramo- sissimus, ramis stramineo-flavescentibus, ápice sub- tetragonis, striatis. Folia longitudinem maximam- 1 cm. attingentia, 6 mm. lata, ovato-oblonga, vel oblon- go-sp;ithulata, lana plus minus immersa, carnosa, ses- silia, fere amplexicaulia, auriculata, vel semiample- xicaulia. marginibus subrevolutis crispa, necnon in toto ambitu vel ápice tantuní irregulariter dentata. Capitula heterogama. 50-60 ñora, in ápice ramorum terminaba, solitaria, vel lateralibus ápice ramorum 1-2 adjectis subcorymbosa, pedunculata (pedunculis quam capitulum lougioribus, vel brevioribus, bracteis 1-3, lineari-sagittatis instructis) vel tere usque ad ba- sim foliosa. Involucra pallide viridi-flavescentia, campanulata (bracteis 14-10. lineari-lanceolatis, mar- gine anguste membranaceo-hyalinis. ápice subobtusis, membranaceis, ciliolatis, 6-7 mm. longis.2V.: mm.latis, carnosulis. aliquantulum connatis) caliculata(bracteo- lis 3-5 mm. longis, basi circiter 1 mm. latis, triangula- ri-linearibus, acutis), primum lanata, denique glabra- ta. Recpptaculum íbveolatum. Flores radii 5-11; coroUae tubo 3 mm. longo, lingulis flavescentibus, api- ce tridentatis, 5 mm. longis, 2 mm. latis; styli ramis glabris breviter rotundatis. Plores disci circiter 40-50, coroUae tubo 5 mm. longo, sórdido albido; laciniis 74 mm. lon.uis, subfuscis, glabris; styli ramis ápice subpenicellatis, truncatis. Pappi setae albae, scabrius- - 46 — culae, deciduae, in floribus radii disminutae. Achae- nia "ílabra. He dado a(iiií una descripción completa de la especie porque la del Sr. Remy (1. c.) y la de Wedtlell (Chlor. and. 1. p. 136) son muy coitas é incompletas. Tengo de esta especie la forma genuina, (en que las hojas están casi enteramente escondidas en la lana abundante), recolectada en la Cordillera de la Rioja (Cuesta del Peñón al Sud de la Laguna Brava). La forma de la Provincia de San Juan (del Cerro del Tontal) tiene menos lana; y las hojas, un poco mas peqneñas y con dientes por lo común algo 'mas grandes que los de la forma genuina. no están ocultas en la lana algodonada de color blanco, sino tapadas por ella, en algunos puntos, lauípiñas en otros. La planta tiene un olor fuerte, pero agradable; su nombre vulgar es Sacha-Cuma que se da también á algunas especies aliadas. Florece en el mes de Enero. 109. Wenicria pi/i/niaca (Hook. et Arn. Journ. of bot. III 248). syn. W. Rhizoma (Remy, in Gay, hist. Chil. bot. IV. 215 t. 47. f. 1). íEcheg. 1. e. p. 847 n. 25), 110. Centaurea mclítensís (L. sp. 1297.). (Echeg. 1. c. p. US n. 29). La llaman vulgarmente: Ahre-piiíio. 111. Mtittsía subspinosa (Cav. Ic. 3 p. 64 t, 495). (Echeg. 1. c. p. 348, n. 33). 112. Hijalis an/enm (DC. Prod. Vil. p. 28.), (Echeg. 1. c. p. 348, n, 35). — 47 - \í?>. CliK quiraga Echegaraijl (Plicron. n. sp.). Euckiiquiraga ex afíinitate Ch. insignis (H. B. K.) et Ch. ruscifoliac (Don). Frutex V4-V2 111. altiis, ramosissimus, ramis in- íerioiibus denudatis, cortice fusco, denique cinéreo, rugoso tectis; ramulis superioribus foliorum vaginis glabris tectis. Folia sessilia, alterna vel subopposi- ta, crassiuscula, rigida, coriácea, ovata vel ovato-lan- ceolata, pungentia, basi vaginantia, ramulis adnata, circier 1-2 cm. longa; vagina cauli adnata, circiter 3-4 mm. longa, 2-3 mni. lata, ochraceo-straminea, glabra; lamina V'2-l cm. longa, 3-5 mm. lata, fiavo- viridi. subtus glabra, supra sericea, margine crassa, subrevoluta, glabra, spina apicali 2-6 mm. longa. ochraceo-flavescente. Spinis axillaribus. nullis. Ca- pitula multiflora (circiter 20-30 flora), ad ápices ramu- lorum supremorum sessilia, circiter 1-1 7^ cm. longa. Involucra campanulata;bracteis 5-6. stramineo-ñaves- centibus, 5-6-serialibus; extimis ovatis,- 7 mm. longis, basi fere 3 mm. latis; intimis lineari-lanceolatis, 1 cm. longis, vix 1 mm. latís; ómnibus ápice spinescentibus, extus plus minusve pilosis, longiuscule ciliatis. Recep- taculum faveolatum. parce pilosum, vel glabriuscu- lum. Pappi setae circiter 19, usque adapicem plumo- sae, circiter 5 mm. longae, vel breviores. CoroUa lú- tea, coriácea extus adpresse sordido-pilosa, intus gla- briuscula, tubo cylindraceo. 6 mm.- longo, laciniis 1 . mm. longis, linearibus, rigidis, subnequalibus. An- tberae sagittatae, auriculis caudato acuminatis, circi- ter V^ i^iiii- longis. Styli rami semisubulati, conni- ventes. Acbaenia sordide sericeo-villosa. turl)inata (in flore circiter 3 mm. longa). En la falda del Cerro del TontaL lado del Naciente; en Enero, con flores. — 48 - ■ 114. Ch.nquira \' — 6G — aprovechado de las de mi colección Riojana para hacer la descripción que antecede. LABIADAS 1Q4:. Mentha aquatica (Lin. sp. p. 805). var. íjlahrata (Benth. in DC. Prod. XII. p. 171) syn. M. citrata (Ehrh. beitr. 7p. 150). En las márgenes de los arroyos del Leoncito, en Ene- ro, sin flores ni frutos. 165. Salvia Gilliesü (Benth. Lab. p. 265). (Echeg. 1. c. p. 349 n. 44). \QQ.Marrubiuin vulgare (L. sp. p. 816). (Echeg. 1. c. p. 349 n. 45). VERBENÁCEAS 1Q7. Dipyrena glaber rima (Gilí, et Hook. Bot. Mise. I p. 356 adnot. ad ind); syn. Wilsoaia ¡/'. (Gilí, et Hook: 1. c. p. 173 tab. 49). (Echeg. 1. c. p. 349 n. 47). 168. Verbena asparagoides (Gilí, et Hook. Bot. Mise. I p. 165) syn. V. brgoídes (Echeg. 1. c. p. 350 n. 50, non Phil. Viaj. Des. Atac. p. 214 n. 272!). 169. Verbena Echegarayi (Hieron. n. sp.). Verbenaca subverticilliflora ex affinitate V. asperae (Gilí, et Hook.) et V. LorenizU (Niedrl.), fruticosa patentiramea. ramulis juventute hirtellis, fuscis, de- mum substriatis, cinereo-ochraceis, nodulosis (cicatri- cibus foliorum et ramulorum abbreviatorum reüquiis prominentibus). Fola alterna vel in ramis abbre- viatis axillarum proliferarum fasciculata; inferiora oblongo-lanceolata, subspathulatave, subobtusa in petiolum brevissimum attenuata, marginibus subre- — 67 - voluta, crassiusciila; superiora cordato-lanceolata, miicronulata,, subsessilin; júniora utrinque parce hir- tella, 5-8 mm. ionga, 1 '/a-S mm. lata. Spicae niulti- florae, laxe imbricatae, 2-7 cm. longae. Bracteae sessiles, rhomboideae, ciliatae, utrinque glabriuscu- lae, vel parce liirtellae, cálice breviores, 4-47í. mm. longae, l'/a mm. latae, subacuminato-mucronatae. Calix extus subhirtello-pubescens, intus glaber, 5 mm. longus; dentibus 4, exiguis, vix '¡2 mm. longis, subu- lato-acuminatis, aequalibus; quinto postico obsoleto vel rudimentario, minimo. Corolla dilute azurea (teste Echegaray), glabra; tubo S mm. longo, gracili, recurvo; limbo 5-partito; laciniis subdenticulatis, vel emarginatis. Esta especie nueva se encuentra en las cercanías del Leoncito, en donde florece en Enero. 170. Verbena serip/iioides (Gilí, et Hook. Bot. Mise. v. I p. 164 n. ll)._Syn. V. ecliinata (Phil. An. Un. Chil. 35 p 191 n. 171: forma tubo coroUae breviore calicem vix superante ex spec. authent.!)- La forma no es la misma que describen Gillies y Hooker (1. c); siendo las espinas enteras y no tripartidas del largo de 1 cm. hasta 12 mm., estando además las ñores puestas generalmente de á pares, y hallándo- se estas solo rara vez. El ejemplar entregado al Museo botánico, tiene un tronco grueso, de 2 cm. de diámetro, leñoso, torcido, del que suben ramos leñosos del largo de 14 cm. á lo más. Los ramitos abreviados que salen de los sobacos de las hojas, de forma de espina, son cespitosos, ramificados y muy cortos. No obstante, no hay razón para separar esta forma Sanjua- nina de la descrita por Hooker y Gillies ni tampoco de la V . echinata (Phil.) especialmente por la circunstan- cia de encontrarse en las Cordilleras formas intermé- u^ dias que unen la una con la otra. Se halla en el Cerro del Tontal; en el mes de Enero, con flores. 171. Vcrlx'un crinacea (Gilí, et Hook. Bot. Mise. I p. 146.) En las cercanías del Leoncito; florece y tiene los primeros frutos maduros en Febrero. 172. Verbena caespUusa (Gilí, ct Hook. in Bot. Mise. I p. 165) En el Cerro del Tontal; florece y tiene los primeros frutos maduros en el mes de Enero. 173. Verbena bonariensis (Linn. sp pl. p. 2^). (Echeg. 1. c. p. 349n. 48). 174:-. Verbena erUkmlfolia (Gilí, et Hook. in Bot. Mise. I p. 169). (Echeg. 1. c. p. 350 n. 51). Se llama vulgarmente: Bicliicho. 175. Verbena erínoides (Lam. ill. 1 p. 57). (Echeg. 1. c. 350 n. 52). 176. Verbena m.endocina (Phil. An. Un. Chil. 35 (1870) p. 191 n. 169, ex specim authentico!). Perennis (?), antheris staminum duorum superio- rum, ut in specimine authentico appendiculatis, ap- pendiculis obovato-clavaeformibus, in sicca sordide aurantiacis, antheras superantibus! Se encuentra en las cercanías del Leoncito; en Febre- ro, con flores. 177. Verbena microphiilla (Kth, in H. et B. nov. gen. et sp. 2 p. 272 t. 133 ex descriptione ap. Schauer in DC. Prod. XI. p. 551). a. foliis parce strigoso-hispiduhs. syn. F. sulfúrea (Echeg. 1. c. p. 349 n. 49 non Sweet!) b. foliis dense strigoso-hispidulis, canescentibus. syn. V. sulfúrea var. canescens (Phil. An. Un. -- 69 — Chil. 35 (1S70) p. 190n. 1(35, ex speeimine au- thentico!). Las dos formas se encuentran en las cercanías del Leoncito; en Diciembre hasta Febrero, con flores. llS.Lippia nodiflora (Rich, in Michx fl. bor. am. "2. p. 15) syn. Verbena nodi/Iora (L. sp. pl. p. 28). var. sarmentosa (J. C. Schauer, in DC. Prod. XI. ]). 585 n. 52). (Echeg. ]. c. p. 350 n. 53)) 179. Lippia foHolosa (Phil. An. Un. Chil. 35 (1870) p. 192 n. 178). (Echeg. 1. c. p. 350 n. 54). GNETÁCEA 180. Ephedra ochreata (Miers. Contrib. II. p. 169 tab. 77 B.) Arbusto en los Médanos de la Rinconada. El ejem- plar, recolectado en Febrero, es femenino y tiene algu- nos pocos frutos maduros. GRAMAS 181. Broriius unioloides (Humb. etKth. Agrost. syn. p. 415 enum. II. supl. I. p. 341 ex determ. Griseb. Pl. Lor. n. 762 et Symb. fl. arg. p. 286 n. 1823). var. sanjuanina (Hieron. n. v.). vaginis pilis reversis pubescentibus; ligulis lacerato- denticulatis; paniculis suberectis; radiis 1-4, 1-4-spicu- latis; spiculis 5-7-floris, 1-2 cm. longis; palea inferiere 9-nervia. Caeterum vix a forma genuina differt. Tiene el nombre vulgar: Cebadilla. El paraje especial de la Provincia de San Juan, en donde ha sido coleccionada, no está indicado en la eti- queta. En Diciembre tiene flor. — 70 — 182. Polijpogon interruptus (Humb. et Kth., Agrost. syn. p. 233). (Echeg. 1. c. p. 344 n. 2). 183. Polypogon monspelíensis (De.sf. Agrost. syn. p. 232. (Echeg. 1. c. p. 344 11. 3). CIPERÁCEAS 184. Cypcrus vegetus (Willd. sp. I. 283). (Echeg. 1. c. p. 344 n. 4). JÚNCEAS 185. Juncus baUicus (Willd. BerJ. Mag. 1809. 298). var. crassiculmis Buchenau (Pl. Lor. p. 219 n. 841, Symb. fl. arg. p. 316 sub n. 2066). Tiene el nombre vulgar de Junquillo. En la etiqueta no está indicado el paraje especial de la Provincia de San Juan donde ha sido coleccionado. En Diciembre tiene flores. 186. Juncus stipulatus (Ns. Mey. n. act. N. C. XVIII supl. 1. 127 sec. Buchenau. in Gr. Symb. fl. arg. p. 316 n. 206S). Tiene el nombre vulgiu': Tripa del agua. Se encuentra en la Ciénega del Medio, cerca del Leoncito, en Enero, con flores. LILIÁCEAS 181. Habranthus gladioloides (Hieren, n. sp.). Bulbus Foha (in specimine 8), circiter 25-30 cm. longa; lamina plana, striata, 2-3 mm. lata, linearla, ápice obtusa; víigina membranácea, striato- parallelinervia. Scapus fohis paulo brevior (diam. 2 mm.), 2-5-florus. Spatha biíbliata, foliohs 47^-7 cm. 2-4 mm. latis, basi breviter connatis, oppositis, linea- — 71 — ribus, rubris (ex sicco!). Flores cernui, pedicellati, pedicellis IVí-SVa cm. longis, ima basi snepe bracteo- latis (bracteolis lineari-snbulatis; majoribus circiter Vji cm. longis). Perigonium rubrum (?); tubo brevi, 5 mm. longo, crassinsculo, cylindraceo (diam. ad IY2 mm.); laciniis subinaequalibus, 372-4 cni. longis; exterioribus (sepalis) lineari-lanceolatis, aciitis, ápice barbulatis, duobus lateralibus (inferioribiis) ensifoV- mibus 3 mm. latis, postico (superiore) ñútante, sub- complicato inferioribus paulo breviore, angustiore, 2 mm. lato; interioribus (petalis) lanceoUitis, acutiuscu- lis, mucronulatis, ápice barbulntis, circiter 4-5 mm. latis, 2 inferioribus subensiformibus sepalis laterali- bus simillibus, postico subcomplicato, subnutante. Staminasubinaequalia,íilamentisfiliformibusperigonii laciniarum í'auci squamulis 5, trinngularibus, l'/a mm. longis, subcilinto-laceratis instructo pariter in- sertis, supra insertionem geniculatis, perigonio longio- ribus, antheris (exstat solumniodo una!) oblongis, 272 mm, longis; 1 mm. latis, versatilibus. Stylus stamina superans (circiter 47-' cm. longus); stigmate obsolete trilobo. Ovarium (in flore) 4-5 mm. lon- gum, triloculare, loculis multiovulatis, ovulis biseria- libus, compressis, horizontalibus, alternatim super- positis. Se halla en las cercanías de los Paramillos; en Ene- ro, con flores. IRIDEAS 188. Sisyrinchiuin macrocarpunt (Hieron. n. sp.). S. caespitosum, circiter 10-25 cm. altum, radico fibrosa; scapis pluribus ancipitibus, 3 mm. latis foliatis, arcuate ascendentibus vel suberectis. Folia lineari-ensiformia, glabra, acuta, striata, multinervia, — 72 - vaginantia (vaginis margine aiiguste pellucido-mem branaceis, circiter dimidium laminae aequantibus)^ glauco- viridia; radicalia majora (in speciininibus 10-25 cm. longa, 4-5 mm. Lita); caiüina infra spathas 1-2, minora, decrescentia, apicem scapi subaequantia, Spathae glabrae; laterales nulbie vel 1-2-foliaceae, internodiis elongatis (in specimine vmo circiter 5 cm. longis) separatae, ;iltern-^.e, apicem scapi vix attingen- tss; pseudo-terminales 2, approxiniatae, subsimiles, lateralibus breviores, bracteaefoimes, latius vaginan- tes, subobovatae, complicatae, (in specimibus 3-5 cm. longae, 12-14 mm. latao). Flores iii axillis spatha- riun 3-5, fasciculati (in cyman serialem dispositi?), pedicellati; pedi(;ellis subtriquetris, post anthesim elongatis, 2Y2-3 cm. longis, glabris, basi bracteatis^ bracteis membranaceis, striatis, ovato-lanceolatis, obtusiusculis, glabris, pedicellis fructiferis, paulo bre- vioribus. Perigonium violaceum (?), laciniis subobo- vatis, circiter 8-10 mm. longis, 5 nnn. latís, pseudo- pinnatinerviis (ñervo mediano crassiusculo, laterali- bus utrinque 4, parte inferiore ñervo mediano valde approximatis. parallelis, denique arcuate patenti- bus). Staminum filamenta vix 2 mm. longa, basi in tubum brevem circiter 1 mm. longum, minute glan- dLiloso-papillosum connata; antherae basi profunde emarginatae, circiter 372 mm. longae, 1 mm. latae, versátiles. Stylus circiter 4 mm. longus, usque ad médium 3-fidus, ramis capitato-stigmatosis, minute glanduloso-papillosis. Ovarium glabrum. Capsula oblonga, c. 2 cm. longa, 1 cm. lata, glabra, trigona^ loculis carinatis, multispermis. Semina subglobosa, testa coriácea, rugiüosa, atra. Embryo axilis. El Dr. Echegaray ha recolectado un ejemplar de esta especie en las cercanías de bis Cuevas, Provincia de San Juan, en Enero, con frutos. Yo la he encentra- — 73 — do en la Sierra Famatina, cerca de la Mina Jareta y de la Cueva de Pérez, en la altura de próximamente 3500 metros sobre el nivel del mar; en Enero, con flores y frutos. He aprovechado de mis ejemplares para completar la descripción. ISd.Sisyrinchíum iridifolium (Kth. nov. gen. 1^260). var. miiiiir (Gay, hist. cliil, bot. YI p. 22). (Echeg. 1. c. p. 344 n. 5). EQUISETÁCEA 190. Equisetum giganteum (L. sp. ed II, 1517, n. 7). syn. E. rariiosissimum (Echeg. 1. c. p. 344 n. 1 non Desf!). HELÉCHO 191. iSotholacna nivea (Desv. ex det. Griseb. Symb. fl. arg. p. 342 n. 2221). La íorrna recolectada por el Dr. Echegaray es inter- media entre las dos variedades ohlongata y teñera (Griseb.). Se halla en la Quebrada del Paramillo, en las cercanías de los Médanos. En Enero, con esporan- gios maduros. Una planta de la colección del Dr. Echegaray ha que- dado sin determinarse enteramente, solo puedo decir que seguramente ella es una Ouenopodiácea del género Obione. Ha sido recogida en las cercanías de la Rin cenada, en Febrero sin ñores ni frutos. Córdoba, en Diciembre 1880. G. Híeronymus. -^^- Sobre la necesidad de borrar EL GÉNERO DE COMPUESTAS LORENTZIA (Grisel].) Y SOBRE UN NUEVO GÉNERO DE EUFORBIÁCEAS LORENTZIA POR G. Hieronymus. I. El Género de Compuestas Lorentzia ha sido propues- to por el célebre Botánico A. Grisebach en su primera é importante obra sobre la flora argentina: Plantía e Loren- tzianae (p. 135 n. 472). Sigue la reproducción de su característica del género y diagnosis de la especie: LORENTZIA noy. gen. Capitulum discoideam, heterogamum, subglobosum, multiíloruui, floribus in ambitu femineis subtriserialibus fertilibus, disci interioribus hermaphroditis sterilibus. In- volucrum 1-2-seriale, foliaceum, in paleas sensim tran- siens, his achenia excedentibus ápice subulatis, interiori- bus inferné membranaceis nervoso-striatis concnvo-com- plicatis flores amplectentibus. Receptaculum angustissi- mun, conico-filiforme (?pilaeforme?), undique paleatum. Corollae tubulosae, 5-dentatae. Antheraefl ivae, solubiles, basi minutissime biauriculato-sagittatae. Stylus divisus, in floribus hermaphroditis profunde bifidus, ramis ápice, — 75 - in apendicem conicam hispidulam XDioductis. Achenia crassa, obpyramidata, ápice truncata, exteriora 3-, inte- riora 4-gona, pappo e medio disco minuto brevissime cyathiformi ciliato-dentato et aristis paucis multo longio- ribus nunc dificientibus aucto. — Herba annua, stricta, scabro-hispidula, ramis paucis ápice monocephalis, íblüs oppositis, lanceolato-linearibus, subintegerrimis vel pauci- dentatis, triplinerviis, floribus flavis, acheniis glabriuscu- lis costulatis. Genus inter Melampodincas et Heliantheas ambiguum, ab illis stylis ómnibus bifidis, ab liis antheris haud nigri- cantibus distinctum, juxta OgicrcDn inserendum et Aspi- liae habitu affinius, in honorem detectoris nominatum. 472. L. pascalioídes Gr. — Herba sesqui — 2-pedalis, foliosa, foliis basi longe attenuatis et ad nodum integrum linea annulari confluís ramulisque foliatis. internodia aequantibus vel excedentibus (3-4 " longis, 3-6 '" latis) acuminatis, repando-denticulatis, vel integerrimis, denti- bus infimis saepe majoribus (1 '" longis); capitula sub nnthesi 6 '", íructifera 10 '" diam.; involucri folióla lan- ceolato-acuminata, 5'", paleae 3 '", achenia 2'" longa; haec 'ápice planiuscula 1 '" diam., miiuite scabriuscula versus pappum centralem, striatula; pubes scabra folia aequaliter obducens, setulis adpressis antrorsum versis. Santiago del Estero, copióse in forma.tione Chacras dicta pr. urbem. Un examen del ejemplar original, que se halla en el Museo Botánico Nacional de Córdoba y que ha sido recolec- tado por el Señor Dr. Lorentz en las cercanías de la ciudad de Santiago del Estero, me convenció, hace tiempo, que el Dr. Grisebacli habia tenido en sus manos ó un ejemplar monstruoso de la planta en cuestión, ó que habia cometido un error, debido á alguna otra causa encontrándose la cabe- zuela florífera de nuestro ejemplar, no «discoidea», sino que — 76 — las flores temeninas de la periferia de .su cabezuela son bien desenvueltas, teniendo todas ellas língulns. Entonces fué que el examen de algunas cuantas cabezue- las de la planta viva que se cria en abundancia en las quin- tas de Córdol)a, me permitió esclarecer el caso. La planta posee en sus Cabezuelas heterógamas, flores heimafroditas del disco y además flores femeninas que tienen lingulas y están puestas en una sola ó en dos series cuyos miembros alternan, formándose asi igualmente el aspecto de una sola serie á la periferia de la cabezuela. Las dos clases de flores tienen siempre (y he examinado un gran número de cabe- zuelas!) óvulos bien desenvueltos en sus aquenios y solo por causas secundarias quedan sin fecundarse, no encontrándose en medio del disco ningunas flores estériles «a priori», como tampoco nunca en las flores linguladas de la periferia. De donde derivaba la descripción falsa dada por el Dr. Grisebach? Las corolas linguladas de las flores femeninas se caen con su estilete, pasado iijgun tiempo de haberse fecundado los óvulos, y quedan solo sus aquenios en la cabezuela. Estas flores se abren antes que las del disco, las que en- tonces siguen en orden centripetal, ó mejor dicho acropetal estando el receptáculo de la cabezuela cónííio. Las flores hermafroditas tienen dos estados diferentes. Primeramen- te entran al estado masculino, es decir que las anteras de Jos estambres sobresalen del limbo de la corola luego de haber esta desplegado las partes libres de sus pétalos, efec- tuándose un crecimiento i'ápido en los filamentos de los estambres, mientras que el estilete con su estigma queda todavía oculto en el canuto de la corola. Las anteras se abren y despolverizan sus granos de polen secándose y des- pegándose una de otra ó abriéndose á lo menos el canuto de las anteras, antes unidas, inmediatamente después. Enton- ces llegan al estado femenino. El estilete principia á empu- jarse de resultas del crecimiento intercalar que se efectúa / / — en su base, y sale del tubo de la corola, ^desplegando los ramos de su estigma sobre el limbo abierto y encorvándoles al lado externo, á fines de presentarles á la fecundación de los granos de polen que les traen de otras flores los insectos. De este modo todas las flores del disco continúan á abrirse, á llegar al estado masculino y después al estado femenino, encontrándose á veces las flores mas centrales aun sin abrirse y en estado de botón, mientras que las flores feme- ninas de la periferia se hallan ya fecundadas y que la pri- mera serie centripetal de las flores hermafroditas está en estado femenino y una ó dos mas series interiores están en estado masculino. Mas tarde llegan las flores del centro al estado masculino. En la misma cabezuela se encuentran generalmente 2 á 3 series exteriores en estado femenino, no hallándose con ge- neralidad, en este tiempo, existentes las corolas linguladas de las flores femeninas, pues están desprendidas del aquenio y caldas de la cabezuela. Una cabezuela semejante tenia Grisebach, cuando hizo la descripción de su nuevo género Lorentzía, y cayó en el error de tomar las flores hermafroditas en estado femenino por femeninas á'priori, no advirtiendo los aquenios de las flores caldas linguladas periféricas de la cabezuela. En su segunda obra sobre la Flora argentina titulada: Symbolae ad Floram argentinam, el Sr. Grisebach dá las siguientes noticias complementarias de su descripción anterior, pag. 189 n. 1161. Lorentzia pascalioides (Gr.) (472).— Speciminibus uberioribus missis characteri genérico haec addantur: Capitulum nunc discoideum, nunc floribus femi- . neis seriei extimae nonnuUis fissis, inde in lingulas disco aequilongas (3-4 '" longas) ápice inaequahter2-3-dentatas transformatis incluso radiatum, nunc lingulis neutris, elon- gatis, (1 " longis), luteis, 12-nerviis; receptaculum demum convexumj adíenla centraha abortiva nunc numerosa. — 78 — nunc pauca. H)rma radiata Imbitu accedit ad Aspiliam pascalioídem (Gr.), differt vero ab eadem involucri squa- mis lanceolatis lingulisque luteis (non aurantiacis) earum- que nervis discoloribus magis numerosis nec nisi ápice confluís. — Ex locis natalibus verisimiliter eadem erit Pas- calia glauca (Hook. Ani.), ñeque vero est planta in Andr. Bot. repos. t. 549, plañe aliena et cum Pascalia glauca (Ort.) chilensi conferenda. — Entre-Rios, Córdoba (Loca Pascaliae ap. Hook. Arn.: «Uruguay— Bonar. et San Luis - Mendoza ») . Examinando los ejemplares auténticos, determinados en tiempo después de la publicación de las Plantae Lorentzia- nae por el Sr. Grisebach con el nombre de Lorentzia pas- calinides, las que se hallan en nuestro Museo, noté á prime- ra vista que en esto el Dr. Grisebach habia confundido dos especies muy diferentes. La una era la planta anterior, de la que el Dr. Lorentz le habia mandado otros ejemplares mas recolectados en las cercanías de Concepción del Uru- guay. A estas se refiere el pasage: «nunc floribus femineis seriei extimae nonnullis fissis, inde in hngulas disco aequi- longas (3-4'" longas) ápice inaequaliter 2-3-dentatas trans- íormatís incluso radiatum»; describiendo él de este modo una cabezuela en las que se hallaban todavía las flores lin- guladas de la periferia; la otra era una especie del género Viguiera (H. B. et K. nov. gen.) que le habia mandado yc^ mismo y que habia recolectado entre la Cueva y la Capilla de la Candelaria, en las prolongaciones setentrionales de la Sierra Achala de Córdoba, (la etiqueta lleva el número 660). A esta última planta se refiere el pasage: «nunc hngulis neutris elongatis (1 " longis), luteis, ISnervüs». Por pa- recerme nueva, daré de esta especie de Viguiera una des- cripción en otra ocasión oportuna. Aquí nos limitamos solo á tratar de la planta verdadera, descrita por Grisebach con el nombre de Lorentzia pascalioides. — Refiriéndome al pasage de esta descripción; «achenia centralia abortiva — 79 — nunc numerosa nunc pauca», tengo que contestar que, en ninguna de las muchas cabezuelas examinadas he encontra- do aquenios positivamente abortivos. En todas las flores del disco se halla un aquenio y óvulo bien desenvuelto. Pero sucede á menudo que no se fecundan las flores herma- froditas del centro, resultando seguramente este hecho de que estas flores son las últimas que llegan al estado feme- nino después de haber desflorecido ya todas las otras de la misma cabezuela, hallándose asi eliminada su fecundación por el polen de flores pertenecientes á la misma cabezuela; ademas, estas flores centrales serán seguramente visitadas raras veces por los insectos que llevan el polen de una cabezuela á otra, por ofrecerles poco atractivo la pequeña cantidad de miel que queda en los nectarios, y que, en gran parte, habrá sido consumido ya durante el tiempo del esta- do masculino de estas flores centrales, que no tienen mas anteras llenas de polen para atraer á los insectos que se mantienen de este. Es pues evidente que el óvulo de dichas flores quedará muchas veces sin fecundarse y sin transformarse en semilla, secándose por consiguiente todo el aquenio. De ahí proviene el error del 3r. Grisebach. En las «Symbolae», Grisebach ha propuesto una nueva especie Aspilia pascaloides (p. 191 n. 116S) á la que se re- ñere en el pasage (p. 190): «Forma radiata habitu accedit ad Aspiliam pascaloldem (Gr.), diífert vero ab eadem invo- lucri squamis lanceolatis, lingulisque luteis (non aurantia- cib) earumque nervis discoloribus, magis numerosis nec ni si ápice confluís ». Era para mi de suma importancia compa- rar esta planta. Pero resultó de la comparación hecha de los ejemplares auténticos remitidos por el Dr. P. G. Lorentz, que no pertenecían estos ni al género Aspilia, pues tienen las flores linguladas de la periferia femeninas y no neutras, y á mas, no son sino una variedad poco ramificada de la — 80 — misma planta descrita por Grisebach con el nombre de Lorentzia pascalioides. La cuestión consiste ahora en averiguar si se ha hecho otro error y está descrita otra vez la misma planta en las «Symbolae», ó si no ha habido un cambio de etiqueta ó al- guna equivocación del Dr. Lorentz al remitir este, bajo un mismo número, al Dr. Grisebach la especie de Aspilia, y la otra planta al Museo de Córdoba.. Me inclino á creer lo último, especialmente por que Grisebach ha dado (p. 190) los caracteres diferenciales de las dos especies en cuestión y describe las hngulas de la Aspilia pascaloidcs del largo de 1 7-2 pulgadas, longitud que las de la planta nombrada LoreiUzia pascalioides no alcanzan seguramente nunca. Al final de las notas de las Symbolae, el Sr. Grisebach dice lo siguiente: «Ex locis natalibus verosimiliter eadem erit Pascalia glauca (Hook. Arn.), neipie vero est planta in Andrews, Bot. rep. t. 549 plañe aliena et cum Pascalia glauca (Ort.) cliilensi conferenda. No puedo juzgar si la lámina en Andrews Botanists Repository, corresponde ó no á nuestra planta, no teniendo este hbro á mi disposición, pero creo que en este asunto debe tener razón el Sr. Grise- bach y que es otra la planta dibujnda allá y quizás la mis- ma que el Señor Bentham (Bentham et Hooker, gen. plant. II p. 369) ha tenido á la vista, cuando hizo la descripción del género Pascalia, en la que dice: «Involucrum hemisphae- ricum, bracteis sub-2-seriatis; exterioribus angustis, lierba- ceis, interíoribus Intioribus. lanceolatis, membranaceis. Re- ceptaculum subplanum », no correspondiendo á nuestra planta ni la descripción de las bracteas involúcrales como tampoco la del receptáculo. Sin embargo, me parece casi seguro que el nombre de Pascalia glauca pertenece á pesar de todo á nuestra plantea. Me taita la obra de C. G. de Ortega. A. Palau y Verdera (titulada: Novarum aut rario- rum plantarum horti regii botanici Matritensis descriptionutn decades etc. 1797-1800) para probar lo que adelanto. No — 81 — obstante, sigo en esto á hombres científicos como A. de Candúlle (Prod. p. 549), Remy (en Gay, hist. Chil. bot. IV. p. 279), cuyas descripciones, aunque no exactas, no dejan de corresponder muy bien á los caracteres de nuestra planta, y creo que, en caso no le convenga el nombre propuesto por Ortega, ella por lo menos forma seguramente parte del género Pascalia y está conocida hace tiempo bajo el nombre (entonces prestado de otra especie!) de P. glauca. Debe pues en todo caso borrarse el género Lorentzia, estando el género Pascalia representado por dos especies . ó, si son idénticas, por una sola. Doy en seguida una descripción exacta (en latin) de nues- tra plantn, para facilitar á los l)otánicos que tienen á su dis- posición la literatura que me falta, su comparación con la lámina y la descripción de Ortega y con las que hay en Andrews, Bot. Rep. Pascalia glauca (Ortega, Dec. 4, p. 39, lam. 4. Willd. sp. 3, 222S. Cass. dict. 46 p. 406, Less. syn. 228. ex des- criptione ap. DC. Prod. \. p. 549 et Píemy in Gay, hist. chil. bot. IV p. 279 et 2S0.), syn. Lorentzia ¡mscalioitlcs (Griseb., Plant. Lor. p. 135 n. 472 et Symb. flor. arg. p. 189 n. 1161 ex parte!). Herba perennis, ^¡í-V/í m. alta; cavdibus scabriusculis ve] glabriusculis, strictis, obsolete striatis, basi subsimpli- cibus vel ramosis; ramis paucis monocephahs. Folia opposita, plus minusve scabra (setulis adpressis, antrorsum versis) vel glalniuscula, sublinearia vel lan- ceolato-linearia, acuminata, subintegerrima vel inferiora paucidentata (dentibus iníimis (saepe unicis) majoribus '2-7 nnn. longis). subtriplinervia (nervis secundariis 2 infe- rioribus suboppositis, quarta parte folii basali ñervo me- diano parallelis, supra quartam partem arcuate patenti- ascendentibus. dimidium laminae percurrentibus), basi attenuata, ad nodum integrnm linea ammlari conflua, internodia aeíjuantia. vel superantia; majora caulina 10-15 Jlol. Aca'l. IV. ,-, — 83 — cni. longa, 2-4 cm. lata, minora in ramis lateralibus circi- ter 3-6 cm. longa, V^-l cm. lata. Capitula helerogama, radiata, floribus radii (circiter 8-24) femineis, disci liermaphroditis, multiflora, circiter 2-272 cm. diam. Involucra hemisphaerica; bracteae lanceolato-acumina- tae vel lanceolato-lineares vel sublineares, herbaceae, 2-seriatae vel sub-3-seriatae in paleas transeunt, discum subaequantes; exteriores 7mm.-10 mm. longae, 2-272 nim. ad basim versus latae; interdum 1-4 lineares, íbliaceae, valde auctae (in specimine uno máxima 4 cm. longa, 72 cm. lata). Receptaculumconvexum, denique auctum, sul)Conicum, medula marcescente cavum, paleaceum. Paleae achaenia excedentes, circiter 6-7 mm. longae, circiter 3 mm. latae, lanceolato-ovatae vel rhomboideo- ovatae, membranaceae ve) submembranaceae et virides, flores hermaphroditos amplectentes, complicatae, ápice subulato-mucronatae. Floros feminei raro staminodiis filiformibus raagis minus- que elongatis instructi. CoroUae aurantiacae,lingulatae, pa- tentes, tubo brevi circiter 1 72 mm. longo, lingua aequaliter breviterque 2-3-dentata, subobovato-oblonga, 7-10 mm. longa, 3-4 nnn. lata, 9-15-nervia. Stylus divisus, bifidus, rarius trifidus, 6 mm. longus (incl. ramis stigmatis supra canal iculatis, 1 mm. longis, filiformibus). Flor-im hermaphroditorum corollae regulares, tubu- losas; tubi parte inferiore I-272 mm. longa, cylindracea, diam. 72 nim., parte superiore (vel limbo elongato), sub- cylindracea. ad insertionem staminum versus paulo am- pliata. 272-3 mm. longa, ápice 5-ñdo; laciniis circiter 7^ mni. longis, basi 7^ mm- iatis, subtriangularibus, supra minute ciliolatis. Antherae flavae, soiubiles, basi minute auricu- culato-sagittatae. Stylus divisus, bifidus; ramis ápice in appendicem conicam, minute riispidulam, productis. — 8:3 — Achaenia glabra, obpyramidata, ápice truncata, ex- teriora o-, interiora 4-gona, a latere compressiuscuhi, omnia crassa (pericarpio demum carnoso), circiter 4 mm. longa. Pappus coroniformis vel subcyathiformis, denticulatus, dentibiis fimbriatis. mine aristis saepius 1-2, tenuibiis ins- tructus, persistens (in achaenio maturo demum carno- SLilus).— Esta es la descripción exacta de nuestra planta. Debo añadir sobre ella algunas palabras mas. El Museo de la Universidad de Córdoba posee ejemplares de las Provincias de Córdoba, Pvioja, Catamarca, Santiago del Estero y Entre-Rlos, y dicha planta está considerada como mala yerba en las quintas y sobre todo en los alfalfares. La designan con el nombre vulgar de sunchUlo y preten- den que es muy venenosa para los animales, especialmente para el ganado vacuno, que no acostumbra comerla en vera- no, señalándose ella en este tiempo por un olor aromático semejante al de las especies de pino y de otras Coniferas y por su gusto un poco amargo, pero que no la desdeña en tiempo de invii;rno cuando esiá media seca. Entonces es cuando la come y se enferma á consecuencia de ello. II. Hace poco tiempo que, revisando las determinaciones y descripciones que ha hecho Grisebach de plantas indígenas de la República Argentina, encontré en las colecciones del Museo, bajo el número 381, mi vegetal quehabia sido deter- minado por él con el nombre de Caperonia acahjp/ii folia (Gr.) y que fué coleccionado, durante el viaje que hize en compañia del Dr. P. G. Lorentz. en las cercanías del Pasa- — 84 — je del Rio Juniraento, provincia de Salta. AcIemáS; encon- tré en las colecciones del Museo, bnjo el número ;>]2, otra forma de la misma especie de hojas mucho mas angostas, la que quedaba enteramente sin determinación, aunque un ramo de ella había sido remitido al Di. Grisebach. Una revista superficial me bastó para convercerme de qué tenia que tra- tar cüii una Eiiforhídcea, ([ue no era la especie mencionada ni pertenecía al género Co^peronia. pues tenía á mi disposi- ción un ejemplar original de la verdadera C. acalyplii folia para hacer la comparación provisoria de ambos vegetales. Parece que el Dr. Grisebach mismo, antes de concluir el manuscrito de las aSymbolae ad floraní argentinam». ha reconocido como falsa esta determinación, pues, al fin de la diagnosis de Capcronia acalijp/üfolia, no está mencionado el lugar en donde habíamos recolectado la planta, mientras que figura él en donde fué en<;ontrada la verdadera C. a ca- li/plii folia. Buscando entre las Enfn-biáccas indetermina- das del Museo, hallé un ejemplar de otra especie que perte- nece al mismo género que la planta salteña y que recogí, durante el año 1876, en las barrancas de las cercanías del Observatorio de Córdoba, Hace poco tíempfj (¡ue, en una excursión á la Sierra de Córdoba, encontré un crecido núme- ro de ejemplares en los alrededores de San Roque, y fué este material que me dio la ocasión dn^ecta de hacer un examen conq^leto de la flor y del fruto del mencionado vegetal; hahiéndome proporcionado después mas materiales proce- dentes de las cercanías de Córdoba, proseguí mis estudios, que pronto me dieron por resultado la seguridad de que la planta salteña y la cordobesa son los representantes de un nuevoymuy interesantegénero de En p/iorbioceaspIatUobeas. perteneciente á la tribu de Enforbitas y que tiene afinidad con los géneros Enp/iorbla, Calycopepliis, Pcclilonthus. S¡/- nadeniuní y Aal/insícrna, tan conocidos por su inflorescen- cia extraordinaria (cyathium, ciatío) de flores unisexuales, (jue finjen una flor hermafrodíta. - 85 - (^■) Estoy preparando sobre este género un trabajo mas extenso, acompañado de láminas en las que está representa- do el vegetal entero, su desenvolvimiento, su morfología y su anatomía. Por ahora, me limito á hacer una publicación preliminar de los principales resultados de mis estudios sobre la morfología y el desarrollo de Ja inflorescencia de la planta cordobesa, y á dar en latin vma característica del género y descripciones de sus dos especies para los botáni- cos que no poseen el idioma español. El vegetal cordobés es un subarbusto, cuya altura pasa apenas de 20 centímetros, que es leñoso en su base, de la que salen una cantidad crecida de tallos herbáceos, cilindri- cos, vellosos (con pelos sencillos ó en forma de estrella) y generalmente poco ramificados. La raíz palaría es cilindrica, cubierta de un periderma rojo-moreno, relativamente gruesa, que tiene hasta 1 centí- metro de diámetro y (pie penetra en el suelo á una hondura de mas ó menos 10 centímetros; en sus partes mas profun- das se ramifica una ó mas veces, echando raices laterales de 2 á 3 milímetros de diámetro ó de un grueso menor que vá adelgasándose mas abajo. Las hojas estipuladas y pecioladas alternan y están dispuestas en la espiral genética Vs- Las láminas de las hojas son aovadas, agudas en su extre- midad y acorazonadas en su base; tienen de 12-15 milíme- tros de largo mayor y de 6-8 milímetros en su mayor anchura. Sus bordes tienen algunas cihas (pelos) y son aser- rado-dentadas, con los dientes mayores de Vji milímetros de largo é igual ancho en su base; con generalidad son termi- nados por un pelo tieso en forma de cerda pequeña. La cara superior de las láminas es lampiña, la inferior posee pelos ramificados en forma de estrellii, aunque en poca cantidad. La nervadura de las láminas de las hojas es pinada: un ñervo mediano se estiende sobre toda la hoja echando ramos Este trabajo se publicara en Alemania. — 86 — (nervios secundarios), con generalidad 4 á 5 á cada lado, que ascienden en curvas y que también se ramifican (nervios ternarios), así que, en la punta de cada diente se acaba un ramo de ellos; á mas de estas ramificaciones se encuentran en los intersticios, éntrelos nervios de primer, segundo y ter- cei' orden, venas (ó nervios cuaternarios) ramificadas en diversas direcciones, las que tienen la forma de unared y son unidas entre ellas (por medio de anastomosis) y se hallan así en conexo con todas las órdenes de nervios. Los dos pares básales de nervios secundarios salen casi del mismo punto del nervio mediano. Los nervios del par mas inferior son relativamente cortos, y los del segundo sobre- pasan en tii.maño á todos los otros nervios del mismo orden ; sus ramos entran á 8 ó 4 dientes de] ])orde de la hoja, mientras que las otras venas, por lo común, no proveen mas que 1 ó 2 dientes. El pecíolo de la hoja es convexo en su cara inferior y cóncavo, ó mejor dicho canalizado en la, superior; su ancho es de -/s niihmt'tros, su largo de 3 á 4 milímetros, y se halla cubierto de vellosmas tupidos que los délos tallos. En su ápice; como también en su base, tiene el pecíolo una pequeña almohada (ó pulvino). es decir una parte abultada. La; estípulas de las hojas son colocadas en la base del pecíolo y su forma es alesnada-hneal, terminándose á veces en una punta con pelo en forma de cerda pequeña. El largo es de 2 á 3 milímetros, y en su base tienen un ancho de '/s á 7-2 milímetro y, en la superficie inferior y en los bor- des, se hallan algunos cuantos pelitos algo tiesos y general- mente sencillos. Todas las partes vegetativas supraterráneas de la planta son de un color verde algo pálido. En los sobacos de las hojas, entre las estípulas, se hallan dispuestas las inflorescencias (jue se componen de uno solo ó de2 á 3 ciatios, formándose en este último caso una pequeña cima ó copa asentada y estando los iiiternodios primeros (basa- — 87 — les) de los miembros que la componen muy cortos; estos se desenvuelven en orden centrípeto, es decir que el miembro mas nuevo se encuentra siempre del lado interno y mas aproximado al eje principal. Las inflorescencias cimosas no están generalmente puestas en la planicie que se encuentra colocada entre la línea media- na de la hoja y el eje del tallo correspondiente, sino un poco ladendas hacia la derecha ó del lado izquierdo de la hoja. Sucede así por que casi siempre la yema de un brote innovador se halla al otro lado de la mediana, junto á la inflorescencia y casi unido con estti en su base. ICsta yema es quizás la primera producción lateral del primer miembro déla inflorescencia cimosa, ó es un segundo brote del sobaco de la misma hoja de apoyo á que entonce- per- tenece la inflorescencia como primer brote axilar: este brote innovador hace ladear la inflorescencia, produciendo sobre esta una prv'sion. Los ciátios que componen la inflorescencia cimosa son pedúnculados. Sus pedúnculos tienen cada uno^ en tiempo de] desenvolvimiento, una bractea aovada muy pequeña, de un largo de V2 milímetro npénas en su base; habiéndose desenvuelto el ciatio, dicha bractea se seca y cae. La forma de los pedúnculos es cilindrica; son ellos, así como los tallos y pecíolos de las hojas, cubiertos de vellos que aquí no son abundantes y tienen forma de estrella ó son sencillos y uni- celulares. El largo de los pedúnculos fructíferos alcanza á un tamaño de 3 á 4 milímetros, mientras que, en estado florífero son mas cortos de IV2 á 2 milímetros. El grosor se aumenta igualmente á medida que llega á fecundarse la flor femenina, y los pedúnculos fructíferos tienen un diáme- tro igual al largo de los pecíolos de las hojas maj'ores. Ya en estado florífero y poco antes de abrirse el involucro exterior, los pedúnculos de los ciátios principian á encorvar- se hacia un lado, sea derecho ó izquierdo, del sobaco de la hoja apoyadora y á doblarse por abajo; de manei'a que, en — 88 — estndo florífero, el eje del pedúnculo forma con el eje del tallo correspondiente, en caso que se crie este enteramente en dirección vertical, un ángulo inferior de 6Ü y otro superior de 120 grados. El pedúnculo de la fruta vá siempre, en toilo caso, aproximándose lo mas posible á la línea vertical, siendo impedido á veces por el tallo y el volumen de su fruto para poder enteramente renlizar esta intención. Estas encorvaduras están en íntima conexión con el acto de la fecundación y con el modo de la dispersión de las semillas. Los pedúnculos tienen, generalmente el mismo color verde que tienen el tallo y los otros miembros vegetativos, no obstante que sucede á veces que su. punta superior está un poco teñida de un color sucio-purpúreo, lo que se vé espe- cialmente cuando ha estado insolado durante el desarrollo. El involucro es doble, es decir, hay uno externo y otro interno. El primero figura como un cáliz y es compuesto de 5 hojuelas de forma lanceolado-aovada, de un largo poco mas ó menos de 2 '/a mm. y cuya anchura mayor es de 1 mm. ; la punta de dichas ho]as es aguda y á veces submu- cronulada, es decir, terminada por un aguijón blanco muy pequeño; la cara inferior tiene algunos pelos relativamente grandes, robustos, algo tiesos, sencillos, en forma de es- trella, y otros pequeños glandulíferos, y sus bordes tienen pelos en cantidad reducida que son igualmente sencillos y un poco tiesos. El color fundamental es un verde pálido y el nervio mediano y las partes limítrofes de la hoja están enteramente teñidos de un color purpúreo ó tienen pequeñas manchas purpúreas dispersas como gotitas. El nervio mediano sobresale un poco de la cara superior. Existen además dos nervios laterales que son mas delgados que el mediano, con él que entran ya libres en la base de la hojue- la y se estienden en el medio de sus mitades sobre dos ter- cias partes del largo de estas, dirigiendo al borde unos cuantos ramitos en forma de venas muy delgadas, y se anas- tomosan al nervio mediano. En su liase, estas hojuelas — 89 — están unidas con sus bordes y el involucro abierto tiene forma de campana; mas tarde se doblan hacia atrás las partes libres de sus hojuelas, plegándose un poco del mismo lado sobre el nervio mediano. A cada lado de la inserción del nervio mediano existe un hacezuelo de glándulas blan- cas, diáfanas, con forma de gusanos encorvados y compues- tas de 5 á 7 celdillas. Estos hacezuelos son quizás restos de estípulas abortivas. El involucro interno simula una corola, teniendo sus cinco hojuelas un color vivo purp.úreo. Alternan ellas con las del involucro externo, hallándose dispuestas en uu verticilo superior, pero son muy próximas al involucro externo, y tienen una forma muy extraordinaria. Su parte inferior, ó úñela, es muy estrecha, en forma de cinta, y sus dimen- siones s(5n: largo 472 á 5 mm., ancho Vio mm. en su base y Y5 mm. en su extremidad superior; en todo su largo la divide un nervio mediano. Estas cintas se encuentran, en el ciatio desenvuelto, encorvadas en línea semicircular é inclinadas hacia el lado-interno y. en su punta, llevan las partes superiores olas láminas, que están colocadas hori- zontalmente (en caso se considere como vertical el eje del ciatio que en realidad no lo es, estando inclinado el pedún- culo como lo hemos dicho ya). Estas láminas tienen la forma de un casco muy bajo con bordes posteriores alarga- dos en forma de ala, y cuya extremidad es escotada y figura un seno ó muesca que penetra en la lámina á poco mas de la cuarta parte de su largo. Los bordes de este seno son dobles, es decir que están limitados por dos pares de dien- tes triangulares, de los que el par interno (el que se halla mas aproximado á la prolongación de la linea mediana de la hojuela) está puesto en la misma planicie de los bordes posteriores del casco, mientras los dientes externos están un poco doblados para, el lado interno ó de abajo (tomando siempre el eje del ciatio como vertical!), en su cara inferior (6 interior!), cóncavos y convexos en la superior (ó externa!). — 90 — El úinbito del casco, no tomando en consideración el seno del margen supremo escotado y sus dientes, tiene forma de un pentágono regular de esquinas redondeadas. Casi en el centro de la página externa de este pentágono, un poco mas aproximado al borde escotado y terminando la parte superior del casco, existe una glándula (emergen- cia) en forma de clava, muy oscura, de un color violado- purpureo, casi negro, y que tiene un cabo purpúreo claro (¡ue alcanza al largo de la clava, midiendo apenas los dos 7* nmi. El nervio que traspasa la úñela penetra poco mas ó menos hasta la cuarta parte de la lámina, ramificándose entonces y emitiendo generalmente dos pares de nervios secúndanos laterales que se reparten por el casco y se dividen algunas veces en dicotomías ; estos ramitos forman raras veces anastomosis y se terminan generalmente en el tejido fundamental, cerca de los bordes, por uno ó dos vasos espiralados. La prolongación del nervio primario se intro- duce en el cabo de la glándula de forma de clava, terminán- dose en ella. La úñela y la página inferior de la lámina son lampiñas, mientras que en la página superior y en los bordes de la lámina se encuentran esparcidos un número considerable de pelos sencillos y algo tiesos. A los dos lados de la inserción de la úñela, se hallan los mismos copos de glándulas gusaniformes que se encuentran á los lados de la base del nervio mediano de las hojuelas del involucro externo. Llegamos ahora á la característica del verticilo sobre- puesto á las hojuelas del involucro interno, al de las cinco flores masculinas que son productos de los sobacos de aquellas. Son estas muy sencillas. Tres tecas amarillen- tas, que se abren por una hendedura longitudinal para echar el polen, están dispuestas en forma de cruz en la punta (connectivo) de un filamento corto y común. Una de ellas está situada en la prolongación de dicho filamento con el dorso pegado á la punta ó connectivo de color blanco; á — 91 — los dos lados de esta y limítrofes, de modo que tocan á la teca terminal, están las otras dos igualmente fijadas por el dorso en toda su extensión. Cada teca se compone de dos lóculos (en sentido moder- no; la escuela antigua designa las tecas con el nombre de lóculos!) y es posible, ó que cada una de estas tecas corres- ponde á un estambre, teniendo entonces cada una el valor morfológico de hoja, ó que las tres tecas son productos de un solo estambre que, entonces, tiene el valor morfológico de hoja pseudo-terminal. Los gr.nnos de polen (pie contienen los lóculos revelan un color diáfano-amaril lento, son globosos y tienen tres aber- turas en sus membranas extei'iias (exinas), las que son lisas y no poseen ninguna protuberancia. A poca distancia de las tecas, cerca de su parte inferior, se halla situada una articulación que es semejante á las que se vén en las flores masculinas de las especies del género aliado Eupliorbia, con la diferencia que, en nuestra planta, se notan generalmente 'cinco lóbulos bien visibles, ó protu- berancias redondas, que representan ' quizas un peiigonio rudimentario de las flores masculinas, teniendo en este caso las prolongaciones básales de los filamentos muy abreviados el valor morfológico de pedicelos. Las partes superiores de estos pedicelos son libres, de forma cilindrica y doblados en estado enteramente desenvuelto para atrás; su largo es de Vio á 7io mm., su grueso de 7' mm. y su color purpúreo. Las partes inferiores de los pedicelos de las flores mascuh- nas se hallan unidas á un tubo en forma de embudo prolon- gado abnjo en un caño verdoso, el que está unido por nacimiento común con el pedicelo de la flor femenina y cuyo limbo campanuliforme y purpúreo rodea al ovario de esta. Las partes del borde de este limbo que separan las partes libres de los pedicelos andróforos, tienen cada una en su medio el adorno de un apéndice ó de una glándula (emer- gencia), la que es de periferia aovada, acorazonada en la base, — 92 — espesa, partida por un canal en dos mitades iguales, tiene su punta un poco aguda, y es de un color vivo purpúreo relumbrante. Como ya he dicho antes, se encuentran las láminas de las hojuelas del involucro interno colocadas transversa luien- te al eje del ciatio. El borde escotado se intercala al borde del tubo andróforo, así que la parte libre y doblada para atrás del pedicelo de (;ada flor masculina se introduce en el seno. Los dientes internos del mismo borde tapan por el lado superior (tomando el eje del ciatio como ver- tical!) las partes libres del borde del embudo andróforo. pegándose á estas, relativamente con mucha solidez; así es (lue, cuando se las quiere desprender, sucede regularmente que se rompe el tejido y se cortnn los dientes ó pedazos de estos, quedándose firmemente fijados al borde del emlnido andróforo. Los dienten externos del borde escotado cubren por el lado de abajo las partes libres del borde del embudo (tomando siempre el eje del ciatio como vertical!). En medio del embudo andróforo está situada la única flor femenina central, que no tiene ningún perigonio desarrolla- do, ni tampo(;o se encuentra en ella la mas mínima indica- ción de un perigonio abortivo, como suele hallarse en géne- ros aliados. Podría creerse que las glándulas y las partes del borde del embudo andróforo que ligan las partes infe- riores de los pedicelos de las flores masculinas, figuran el perigonio de la flor femenina. Sin embargo, esta hipótesis no es muy probable, no hallándose tampoco indicación al- guna de su probabilidad en la historia del desarrollo del ciato. El ovario de la flor femenina es de forma globosa de un diámetro de V* mm.; á lo largo tiene cinco surcos que sepa- ran igual número de esquinas redondeadas. Estas esqui- nas revelan pequeños tubérculos redondos y corresponden á los cinco carpidlos que componen el pistilo. Cada carpi- — 93 — dio tiene lui lóculo, y en cada lóculo hay un óvulo anátro po bien desarrollado, colgado en la punta del ángulo inter- no, y que tiene dos tegumentos y en su micrópila una luasa celular (un «obturator») que seguramente es un óvulo abor- tivo. El estilo común de los cinco carpidios tiene el grosor de V'io-'A mm. y su largo, apenas de -/s mm.. es teñido de un color purpúreo; el corte transversal de dicho estilo es un poco pentágono con esquinas redondeadas. El estigma tiene forma de estrella y esta compuesto de cinco lóbulos globosos blancos, en cuyo medio se halla la entrada para las prolongaciones del polen brotante. En la cápsula en la que se transforma el oviirio después de la fecundación, los cinco surcos y las es(iuinas redondeadas se hacen mas visibles; los tubérculos pequeños crecen para formar pro- tul)erancias cilindricas verdes de un largo hasta de casi 1 mm. y de un grosor maxiiua de '/" ii^™- Estas protubernncias no son tricom-:s, es decir no perte- necen al mismo concepto morfológico que ios pelos de las plantas, sino que son «emergencias», es decir que con la epidermis el tejido fudamental coopera á formarlas y son atravesadas á lo largo por un norvio. Encima de estas pro- tuberancias, como igualmente en la superficie de la cápsula, se hallan pelos generahneiite tiesos, sencillos y estrellados, como también algunas glándulas gusaniformes. En el interior del ovario, estas últimas cubren en número mayor las paredes radiales que separan los lóculos. Como estas glándulas nacen aquí después de la fecundación, no tienen participación alguna en ella y, mas bien, es probable que desempeñan un papel en la aumentación del óvulo fecundado. La semilla madura tiene una testa que se forma princi- palmente del tegumento (integumento) externo, consumién- dose en parte el interno para la alimentación del embrión juntamente con el núcleo del óvulo. Esta te.sta se compo- ne de una capa superficial de un color ceniciento y de una — 94 — capa negra, que queda (]ebajo do ella y revela pequeños tubérculos de forma redonda ó irregular de igual color ceni- ciento y que sobresalen sobre su superficie. El ámbito de la semilla, vista de frente ó por el dorso (del lado de la rafe) es aovado, mientras que, vista por uno de los lados, presenta una forma de media luna obtusa en una de sus puntas (la de la inserción del funículo ó la chalaza). Esta forma muestra surcos redondeados que rodean los costados y el frente y están separados entre si y de las puntas por protuberancias en forma de anillos transversales, un tanto angulosas y de altura un poco variable, pasando como 6 á 8 otros surcos muy bajos y longitudinales por sobre ellas y ahondando un poco mas los valles formados entre las pro- tuberancias anilliformes transversales. El largo de la se- milla es aproximativamente 2V'^ mm.. su ancho mayor en dirección del frente al dorso, Vji mm. y el menor (en direc- ción de un costado á otro) Vj- mm. En la semilla madura, ya n"o existe mas endospenno habiéndose gastado entera- mente, junto con el núcleo ovular y el tegumento interno, durante la alimentación del embrión que. en la semilla ma- dura llena entonces todo el interior de la testa. El género pertenece á las Euforbiáceas platilúbcas, es de- cir que sus cotiledones son aplanados, en forma de dos cír culos unidos como los de un 8, pegados el uno sobre el otro, encorvados para atrás y ensortiiados, cubriendo un cotiledón al otro, y estando un poco torcidos al rededor del punto de vegetación y del miembro hipocotiledonar. Se vé que la, vernacion cotiledonar es muy extraña y, según mis conoci- mientos hasta ahora, no se ha observado en ninguna otra He podido observar la germinación de la semilla. Ella ofrece el caso interesante que las caras del cotiledón que esta plegado sobre el otro se transmutan, así que la cara inferior tiene la vista de gara superior y vice-versa. Podrá fácilmente el botánico científico formarse, por la - 95 - descripción que antecede, una idea exacta de la morfología del género interesantísimo y comprenderá la importancia que debe tener el estudio del desenvolvimiento del ciútio. no solo para la explicación morfológica de esta planta, sino tam- bién para la resolución definitiva de la antigua cuestión tantas veces discutida (véase la literatura citada en Eichler, Biüthendiagramme II p. 386), sí el ciatio de las Euforbíeas, y especialmente él del género Euphorbia, es una flor herma- frodita ó si es inflorescencia compuesta de flores unisexuales, cuestión que, según mi opinión, no está aun enteramente re- suelta, A pesar de todo, por la descripción que precede, se comprende que estoy inclinándome á la teoría que toma al ciatio como inflorescencia, teoría á la que el mayor número de botánicos modernos son favorables. No he todavía concluido del todo mis estudios sobre el desenvolvimiento del ciatio de nuestro nuevo género. Es por este motivo que aqui no doy mas que algunas indicaciones sobre las fases mas importantes de este desenvolvimiento tal como lo conosco hasta ahora, reservándome dar en oportunidad una relación mas perfecta acompañada de lámi- nas. Estas fases las mas importantes de desenvolvimiento son caracterizadas por los siguientes hechos : 1. Los miembros del involucro externa no nacen simul- táneamente, sino sucesivamente en el orden de la disposi- ción del quebrado "¡b. 2. El verticilo de las hojuelas del involucro interno y el de las flores maculinas sobrepuestas, tienen nacimiento co- mún de protuberancias celulares primordiales (primordios) que se forman en el mismo orden de 7^, teniendo cada ho- juela el valor morfológico de hoja apoy adora del eje de cada flor masculina. 3. La úñela de las hojuelas del involucro interno se forma por medio de crecimiento intercalado y muy vivo de la parte estrecha basal de cada hojuela, en un cierto estado de desen- volvimiento adelantado. — 96 — 4. Lns glándulas (jue aparecen entre las flores masculinas nacen al tiempo de realizarse la división del primordio co- mún de estos y de sus hojas apóyadoras. 5. El embudo andróforo se forma principalmente por medio decrecimiento intercalado en la Ínfima parte basal de los primordios del eje de las flores masculinas y en la de los primordios de las glándulas arriba mencionadas, unién- dose estas bases á crecimiento común y formándose así un anillo cei'rado ó una es])ecie de diipie que circunvala y rodea la flor femenina central. 0. El desenvulvimiento del pistilo ó de la flor femenina compuesta de 5 carpidlos é igual número de óvulos, acusa mucha semejanza con el desenvolvimiento de la flor feme- nina del ciatio de Kii phorhia que solo se compone de o car- pidlos. 7. Por medio del estudio del desarrollo, se reconnoce con seguridad el «obturator» del óvulo por im segimdo óvulo abortivo. — No entraré en la característica de la especie salteñn, por no encontrarse diferencias esenciales en su morfología, y me limito á remitir el lector á la característica del género y á las dingnósis de sus dos representantes, que doy en latín en las páginas siguientes. LORENTZIA (Hieron. nov. gen.) Gen US nouuní Eiiphorbiearum. Involucrum dúplex; alterum exterius, subhemisphaeri- cum, caliciforme, foliolis 5, aestívatione valvacea; alterum interius corollaeforme. foliolis 5. imguiculatis, aestívatione valvacea. Elores mascuU 5, ex axiilis foliolorum involu- cri interioris, thecis ;>, apici fllamenti brevissimí communis adnatis, cruciatis, sessílibus, rima longítudínali dehiscenti- bu-í compositi, infra thecas ;irtículati, obsoleto caliculati. - 97 — longiuscule pedunculati, pedunculomm partibiis inferiori- bus in tubuní campanulatum connatis, partibus siiperio- ribus liberis reflexis; tubo florem femineum includente margine inter flores masculos glándulas transversales gerente vel lobulis ligulisque adórnate, infra omnino pedicello floris feminei adnato. Grana pollinis trihilata. Flos femineus centralis, nudus; pistillo carpidiis 5 con- natis composito; ovario S-loculato; locuJis uniovulatis, ovulis obturatore (óvulo abortivo) quasi operculatis, ana- tropis, e medio anguli interni pendentibus, integumentis 2 praeditis; stylis in columnam 5-gonam e tubo androphoro patellaque Jaminis foliolorum involucri interioris compo- sita exsertaní connatis; stigmate stellato, 5-lobo. Suífrutices argentini. 1. L. cordobensis (Hieren, n. sp.). Suffrutex, radice crassiuscula (diam. circiter Y2-I cm.) subcylindracea, descendente, ramosa, peridermate fusco tecta, basi lignescens, 10-20 cm. altus, ramosissimus; ramis superno parce ramosis, pubescentibus (pilis simpli- cibus, reversis vel a basi ramosis, substellatis), cylin- draceis. Folia glauco-viridia, dispositione -¡5 sparsa, bistipulata, petioiata; petiolo ápice subincrassato, supra canaliculato, infra convexo, hirtulo, circiter 3-4 mm. longo, circiter y 2 mm. Jato; lamina ovata, acuta (foliorum maximorum 12-15 mm. longa, 6-8 mm. lata) pinnatinervia (nervis sub-5-jugis, insertionibus parium 2 basalium approxima- tis; intervallis reticulato-venosis), margine ciliata, grosse serrata (dentibus pilo terminatis, inaequalibus, majoribus circiter I72 mm. longis, IV2 basi latís), supra glabriuscu- la, infra stellato-pilosa. Stipulae lineari-subulatae, 2-3 mm. longae, circiter '/s mm. basi latae, ápice acutae, pagina inferiere parce pilosae. Cyathia pedunculata, nutantia, iu axillis foliorum solita- Bt.l. Acad. IV. 7 — es- lía, vel 2-0 in cj^maiTi introráus subsecundam contractam (internodiis priinis valde abbreviatis), basi saepius gem- mulam ramuli innovationis gerentem disposita. Pedunculi recurvi, cylindracei, pubescentes (pilis stella- tis simplicibusque) l'/-'-4 mm. longi, saepe purpuias- centes. Involucra 2; alterum exterius caliciforme, profunde 5-fidum, laciniis basi breviter connatis, trinerviis, sublan- ceolato-ovatis, 272 mm. longis, 1 mm. latis, acuminatis, submucronatis, pagina inferiore parce pilosulis (pilis sim- plicibus vel stellatis), pailide viridibus, parte inferiore ad- nervum medianum supra prominulum versus purpuras- centibus, in anthesi subreduplicatis. Involucrum alterum interius corollaeforme; foliolis libe- ris, purpuréis, longiuscule unguiculatis, ungue incurvato, anguste taeniaeformi, infra laminam V5 mm. basi circiter Vio mm. lato, circiter 472-5 mm. longo; partibus superio- ribus foliolorum ve] laminis depresse galeiformibus, ambi- tu 5-gonis, circiter 1 7^ mm. longis latisque, pagina inferiore parce hirtulis, centro glandulamgerentibus (glándula atro- purpúrea, clavaeformi, petiolulata, incluso petiolulo pur- pureo circiter 7*-l mm. longa), ápice profunde emargin- tis et hinc margine replicatis, utrinque bidentatis, supra androeceum transversis, ápice marginibus tubi androphori infra intraque glándulas ejusdem et marginibus inter se adglutmatís, patinellam flores másenlos a flore femineo separantem formantibus. Flores masculi pedicellati, pedicellorum uninerviorum partibus inferioribus intubum campanulatum, purpureum, florem femineum cingentem, inferné pedicello ejus adna- tum, margine in angulis inter partes liberas pedicellorum florum masculorum glanduliferum, 10-nervium (nervis 5 in pedicellos. Sin glándulas intrantibus) connatis; glandu- lis uninerviis, supra canaliculntis, cordato-ovatis, acutius- culis, crassulis; partibus superioribus pedicellorum refle- — 99 — xis, cylindraceis. purpuréis infra flores masculos thecis 3 flavescentibus rima longitud inaliterdeshicentibus. subses- ■silibus, cruciatis compositos articulato-caliculatis, caliculo obsolete 5-lobo. Grana poUinis subflavescentia globosa, laevia. Ovarium floris feminei primum viride tuberculatmii, dein muricatum, 5-gonum subglobosum, nniricibus viridi- bus, subulatis in capsula adulta circiter 1 mm. longis, obtusiusculis, pilosis, in capsula matura subevanidis. Stylorum columna subpurpurascens, stigmate albido. Seminiá testa olivaceo-glauca, coriácea, tuberculata; em- bryonis cotyledones complnnatae, emarginato-bilobae, ver- natione retrorsum duplicativo-contorta. Endospermiuin in semine maturo evanescit. Habitat in collibus subaridis prope urbem Cordobae Reip. Argentinae, et prope pagos provinciae Cordobae «Cilleras», «San Francisco», «San Roque» dictos etc. frequenter occurrit (G. Hieronymus et C. Galander colle- gerunt). 2. L. saltenia (Hieron. n. sp.). Suffrutex circiter Va metr. altus, ramosus, ramis infer- né longiuscule lignescentibus, peridermate sul)m5cescente tectis, ramosis, superne herbaceis, hirtulis (pilis stellatis vel simplicibus, crispulis), cylindraceis. Folia subglauco-viridia, alterna, dispositione -/s sparsa, bistipulata, petiolata; peíiolo ápice subincrassato, supra canaliculato, infra convexo, pubescenti-hirtulo, circiter 8-10 mm. longo, Ya mm. lato; lamina ovato-lanceotata, acuta, foliorum maximorum 5-6V2 cm. longa, 2-272 cm. lata, pinnatinervia (nervis sub-6-iugis, insertionibus jugo- rum 2 basalium approximatis, interstitiis reticulato-veno- sis), margine ciliata, grosse crenato-dentata (dentibus pilo terminatis, subaequalibus vel inaequalibus, majoribus circiter IV2 mm. longis, 3-4 mm. basi latis), supra parce — 100 — pilosa (pilis siniplicibus vel basi 2-3 ramosis vel substella- tis). infra parce hirta (pilis stellatis vel simplicibus). Stipulae lineari-subulatae vel subfiliformes, circiter l'/í-l mili, longae, circiter 74 mm. basi latae, ápice acu- tae, pagina inferiere pubescentes. Cyathia pedunculata, nutantia in axillis foliorum 4-5 in cymam introrsus subsecundam contractam (internodiis prirnis valde abbreviatis), basi saepius geminulam ramuli innovationis gerentem disposita. Pedunculi recurvi, cylindracei filiformes ('/i mm. diam.), pubescentes (pilis stellatis simplicibusque), sub anthesin 5-6 mm. longi, fructiferi 8-12 mm. longi, virescentes, Involucram exterius caliciforme, foliolis adglutinatis nec basi connatis, trinerviis (ñervo mediano supra promi- nulo), sublanceolato-ovatis, 3 mm. longis, ly» mm. latis, acuminatis, submucronulatis, pagina inferiere hirtis (pilis stellatis, numerosis), pallide viridibus, in anthesi non reduplicatis. Involucrum interius coroUaeforme, foliolis liberis, pur- puréis (?), longiuscule miguiculatis; ungue incurvato, supra anguste subtaeniae formi, infra laminam circiter Va mm. lato, basi angustissimo,ñliformi, G'/s-Vmm. longo; partibus liberis (vel laminis) depresse galeiformibus, ainbitu 5-go- nis (diam. circiter Vji mm.), paginae superioris centro glán- dula clavaeíormi petiolulata, incl. petiolulo circiter 1 mm. longa adornata, ápice profunde emarginatis et hínc mar- gine subreplicatis, utrinque bilobulatis (lobulis subobtusis), supra androeceum transversaliter inclinatis, ápice margi- nibus tubi androphori infra interque lóbulos ejusdem et marginibus inter se adglutinatis patinellam, quae flores masculos aflore femíneo separat, formantibus. I^'lores masculi pedicellati, pedicellis uninerviis, parti- bu-; inferió ribus eorum in tubum campíuiulatum purpu- reum (?), florem femineum cingentem, pedicelloque ejus adnatum, margine in angulis inter partes liberas pedí- ~ 101 — cellorum lóbulos 5 et infra lóbulos lígulas 5 gerentem connatis; lobulis ovatis, uninerviis, mucronatis; partibus superioribus pedicellorum reflexis, cylindraceis, purpuréis (?), infra florem maseulum tliecis 3 rinra longitudinali dehiscentibus, flavescentibus (?), subsessilibus, cruciatis compositum articulato-caliculatis. Grana pollinis globo- sa, laevia. Ovarium floris feniinei primum viride tuberculatum, deinde muricatum, 5-gonum; muricibus subulatis, in cap- sula adulta adliuc immatura circiter 1 mm. longis, obtu- siusculis, pilosis. Semina in specimine adliuc immatura. Habitat: «Pasaje del Rio Juramento, Prov. de Salta Reíp. x\rgentinae ». var. angustifolia (Hieron.). Foliis lanceolato-linearibus, petiolo 4 mm. longo, lami- na 372-4 cm. longa, 6-8 mm. lata. Habitat: «Pasaje del Rio Juramento» cum forma genuina. Sobre una planta liibrida nueva, FORMADA POR EL YCIUMELONGÁTUM(Miers) Y EL LYCIUM CENTROIDES (Schleclit.) POR G. Hieronymus. (con lámina) He publicado en el año 1875 un artículo sobre una planta híbrida formada por las Solanáceas Lycium arf/entinum (Hieren.) y Lycium cestroides (Schlecht.) (en el Boletin de la Acad. Nac. de Cieñe. Exact. tomo II p. 32-47). En este artículo he indicado (creo con razón) el Lycium cestroides como planta madre de la mencionada híbrida y teniendo esta opinión estaba convencido de que debían existir otras híbridas mas formadas por este arbusto como también por otros representantes del género Lycium. No me equivoqué, pues he encontrado hace pocos días (en Diciembre 1880) en las quintas de Córdoba un arbusto que á primera vista tenia mucha semejanza con la híbrida ya descrita, pero vi desde luego que las hojas eran mucho mas angostas (]ue en aquella y un examen superficial me demostró inmediata- mente otras diferencias esenciales y las semejanzas que existen, no solo con el Lycium cestroides, sino también con el Lycium elongatum, de cuya especie se hallaban unos ejemplares á poca distancia, solo á algunos pies, en el mismo cerco. También he dado, en mi publicación sobre la otra híbrida, una descripción exacta del Lycium cestroides é igualmente — 103 - he añadido en la lámina (en la que principalmente está representada la híbrida) dos figuras (núm. 12 y 13) de la flor de esta especie. Es pues supérñuo volver otra vez aquí sobre este tema y remito al lector á esa publicación, tratan- do solo en esta de la planta híbrida y del Lycium elongatum, arbusto que juzgo ser padre de ella. Siguen á continuación las descripciones exactas en latin. \. LYCIUM ELONGATO-CESTROIDES (Hieron.) Frutex circiter 2 m. altus, ramosus. Rami ramosi ramulosique, recti vel subflexuosi, incurvati, subpenden- tes, cylindracei, juventute minute puberuli (pilis siraplici- bus vel phragmigeris), pallide virides, deinde albo-cine- rascentes. postremo rhytidomate cinei'eo-fusco tecti; ra- mulis abbreviatis vel elongatis. Ramuli abbreviati ramo- rum validiorum saepius in spinas (V2-IV2 cm. longas) transformati par unicum foliorum oppositorum (rarius supra par foliorum oppositorum folia 1-3 alterna.) gerunt, quorum ex axilis ramuli abbreviati folia fasciculata 3-5 gerentes., haud spinaeformes, saepius ñoriferi proveniunt (floribus 1-3), qui anuo próximo a.ut foliis delapsis cicatri- cibusque persistentibus basim spinarum tuberculosam reddunt nec majora incrementa capunt, aut majora incre- menta capunt et elongati in ramos validiores se transfor- mant. Ramuli abbreviati ex axillis foliorum ramorum supremorum procedentes haud in spinas transformati sunt, inermesque saepius folia 3-4 floresque 1-3, fascicula- tos gerunt. Foliorum par primum in basi ramorum ramulorumque oppositum vel folia pauca (3-6) subfasciculata, caetera per ramos internodiis elongatis dispositione spirae -'5 (raro 70 sparsa. Folia omnia glabriascula, subcrassius- cula ñervo mediano utrinque paulo prominente, venis lateralibus obsolete conspicuis, gustu subamara, in petio- — 104 • lum brevem, vix septimam partem laminae aequantem, supra planum, subtus convexum attenuata, piüvino seu gibbere vix conspicuo; laminae íbliorum majorum (in ramis validioribus) lineari-lanceolatae, utrinque acutae, 3-5 cm, longae, 6-9 mm. latae, minorum infloiescentias ramulosque abbreviatos vel ramos elongatos tenuiores cingentiu 11 1-1 7* cm. longae, circiter 3-5 mm. lalae, spa- thulato-lanceolatae, vel lineari-lanceolatae, basi acutae, ápice acutiusculae, vel obtusiusculae. Inflorcscentiae partíales vel in axillis foliorum opposi- torum ramulorum spinaeformium vel in axillis- foliorum apicalium ramorum elongatorum, tenuiorum in spicam terminalem dispositae, seriato-cymosae, sessiles, abbre- viatae, (internodiis primariis membri cujusque minimis, vix conspicuis), 1-3 florae; ñoribus subfasciculatis, pedun- culatis, pedunculis minute puberulis (pilis simplicibus, unicellularibus vel piíragmigeris, ápice subincrassatiis), 4-7 mm. longis. Calix herbaceus, viridis, tubulosus, cylindraceo-campa- nulatus, 5-fidus, tubo glabriusculo, circiter 4 mm. longo, post anthesin fisso, paulo aucto, dentibus inaequalibus, 2 majoribus circiter 2V2 mm.— 3 mm. longis, minoribus circiter I72-2 mm. longis, ciliatis (pilis phrítgmigeris, ramosis), acutis subulato-linearibus, angulis Ínter dentes acutis. Corolla violácea, extus glabra., 5-fida, tubulosa, 14-16 mm. longa; tubo intus supra insertionem staminum pube- rulo (pilis phragmigeris, simplicibus), 12-14 mm. longo; laciniis 272-3 mm. longis, patentibus, lato-ovatis, ápice obtusis, saepius subemarginatis, ad basim versus abrupte contractam circiter 3 mm. latis, margine minute ciliolatis (ciliis simplicibus, raro ramosis phragniigerisque). Genitalia subinclusa. Stamina inaequalia, 2 majora, limbum attingunt (fila- mentis 572-6 mm. longis), 2 minora (filamentis circiter — 105 — 4-5 mm. loiigis), impar quintum his brevius (filamento circiter 3 V2-4 min. longo), omnia supra médium tubi inser- ta; filamentis violaceis supra locum insertionis viridulis, extus parce, intus densius puberulis (pilis phragmigeris, simplicibus); antheris sordide lilacinis. PoUen flavo- aibescens. Stylus staminibus majoribus aequans, viridi-albescens. Stigma capitatum, obsoleto vel conspicuo bilobum, viride. Ovarium viridi-albocens, glabrum, ovoideum, Vji mm. longum, 1 mm. diam. Bacca globosa, vel obovoidea, vei oblongo-abovoidea, 6-12 mm. longa, diam. 4-6 mm., im- matiira viridi.s deinde lutescens, postremo coccinea, cauce fisso íulta, gusto dulci. Semina nuUa abortiva, vel 1-3, flavido-albida, compressa, latero altero concavo altero convexo, ambitu ovata vel oblique ovata, circiter 3 mm. longa, Vji mm. lata; testa externa hyalina papilloso-rugu- losa, interna cornea, ochracea tecta. Germinationem vidi. Embryo bene evolutus, cylindraceus, subannularis. Exstat frutex unicus prope urbem Cordobae, lieipubli- cae Argentinae, inter praedia «quintas» dicta. Floret a mense Novembri usque ad Junium. 5. LYCÍUM ELONGATUM (Miers, Illustr. II p. 112. n. 29). Frutex circiter 1-1 72 m. altus, ramosus. Rami ramosi ramulosique, nodosi. subflexuosi, incur- vati, subpendentes, cylindrici, juventute minute puberuli, pallide virides, deinde albo-cinerascentes, postremo rhyti- domate rugoso, cinereo-fusco tecti: ramulis abbreviatis vel elongatis. Ramuli abbreviati ramorum validiorum saepe in spiuas (3-5 mm. longas) transformati sunt foliaque so- lummodo gemina opposita gerunt, ex quorum axillis ramuli abbreviati, floriferi vel steriles, deinde elonga ti proceduunt. Rarius in ramis validioribus exstant ranmli subelongati — 106 — 1-2 cm. longi, apico spina terminati. Ramiüi abbreviati elongatique ex axil lis foliorum ramoriim superioriim pro- cedentes haucl in spinas transformati sunt saepeque folia 3-5 fasciculata floremque solitarium gerunt, nec nnno próximo majora incrementa capunt. Folia in ramulis abbreviatis, sterilibus 3-8, fasciculata, basi ramorum elongatorum 3-5, fasciculata internodiis brevissmais, vel gemina opposita caeteraque per ramos internodiis elongatis (circiter 3-5 mm. longis) dispositione spirae 75 disposita. Folia ramuí um validiorum lanceolato- linearia, vel linearía, utrinque acuta, ramorum tenuiorum ramulorumque abbreviatorum subcuneato-linearia, ápice obtusiuscula; folia omnia glauco- viridia, carnosula, in pe- tiolum brevem, supra planum, subtus convexum, subula- tum longe attenuata pul vino seu gibbere vix conspicuo, uni- nervia, ñervo subtus prominulo, juventute minute parce- que puberula, deinde glaberrima, gustu dulci-subamara, 1-2 V2 cm. longa, 1-2 Y2 mm. lata. Fios in fasciculis foliorum solitarius, terminalis, vel in ramulis elongatis pseudo-latnralis et pseudo-extraaxillaris, folio fulcranti, ex cujus axilla ramulus sympodium conti- nuans naseitur, plerumque oppositus, saepius hoc ramulo pedúnculo floris adnato altius affixus esse simulatur. Pedunculi parce minuteque puberuli vel glabri, filiformes ápice incrassati in flore 272-3 mm. longi, post anthesin paulo elongati, 3-4 mm. loiigi. Calix herbaceus, crassiusculus, viridis, cylindraceus, tubulosus, 5-fidus, tubo glabriusculo, 2-3 mm. longo, in fructufisso, dentibus inae(iualibus; 2majoribus, 172-I mm. longis, minoribus 3, circiter 1 mm. longis, subulatis, acu- tiusculis, margine minute ciliolatis (pilis phragmigeris, ramosis). CoroUa extus glabra, tubulosa, 5-fida, 12 mm. longa; tubo extus sórdido lilacino, intus violáceo, albo-striato, — 10 / — striis 5 e staminum insertionibus oreuntibus, supra stami- num insertiones puberulo (pilis simplicibus, iinicellulari- bus), 10 nim. loAgo; laciniis ovatis, obtusis, giabriusculis 274-I72 mm. longis, supra basiin abrupte contractam cir- citer 2 mm. latís, libicinis, basi subviolaceo-maculatis. Stamina iiiáequalia; 2 majora, subexserta filamentis circiter 3 mm. longis; 2 minora breviora, filamentis circi- ter 2 mm. longis; quintmii impar bis paulo brevius; om- nia supra médium tubi inserta, filamentis albidis supra locum insertionis intus puberulis (pilis simplicibus, mii- cellulaiibus vel pbragmigeris); antlieris violaceis; pollen albescens. Stylus paulo exsertus stamina majora superans, circiter 8 mm. longus, albidus. Stigma subdisciformi-capitatum, obsolete bilobuui, viride. Ovarium viridi-albescens, basi subñavescens , glabrum, ovoideum, V¡-2 mm. longum, V* mm. latum. Bacca globosa, diam. 4-7 mm., 3-7-sperma, primum pallide viridia, dein coccínea, postremo atro-pm'- purea, nítida. Semina suborbicularla, compressa, latere altero concavo, altero convexo; testa externa hyalina, in- terna cornea, ohcracea tecta. Embryon annulare. Habitat In sllvls rarls, desertls salsuginosis, ñpls etc. Prov. Cordobae, Santiago del Estero, Catamarcae etc. Floret per totum annum. Explicación del as figuras de la lámina LYGIUM ELONGATO-CESTROIDES Flg. J . Ramo con brotes laterales abreviados floríferos y ñnictíferos, que están en los sobacos de las hojas ya caldas en la disposición del espiral genético ^¡h\ tamaño natural. Fig. 2. Parte de un brote de inovacion con la disposición de sus hojas en el espiral Ys y con espinas en los sobacos que tienen en su base 2 hojas opuestas; en la espina X se ha caldo la hoja de apoyo y una de las hojas opuestas; tamaño natural. — 108 — Fig. 3. Flor entera; aumento lineal 2. Fig. 4. Corola con tubo abierto y limbo desplegado con sus estambres de diversos tamaños; aumento lineal 2. Fig. 5. Parte de corola con un estambre largo vista de perfil, para demostrar la inserción de 'este en el tubo; aumento lineal 2. Fig. 6. Cáliz con el ovario oculto en él y el estilete que sobresale; aumento lineal 2. Fig. 7 y 8. Una baya madura de dos lados opuestos; tamaño natural. LYGIUM ELONGATUM. Fig. 9. Un sistema de ramificación compuesto de tres generaciones de brotes: A ramo primario B ramo secunda- rio elongato con brotes laterales ternarios abreviados que han nacido de los sobacos de hojas de apoyo dispuestas en el espiral -/a, en parte ya caldas y que llevan hojas fascicu- ladas y ñores y botones de ñores. Tamaño natural. Fig. 10. Parte de un ramo de inovacion cuyas hojas tie- nen la disposición (en X se ha caido una de estas hojas) 75 y tienen en sus sobacos brotes espiniformes que llevan un par de hojas opuestas en súbase y en los sobacos de algu- nas de estas hojas yemas de brotes nuevos; tamaño natural. Fig. 11. Una ñor entera; aumento hneal 2. Fig. 12. Corola de la flor con tubo abierto y limbo des plegado y con sus estambres de diversos tamaños; aumento lineal 2. Fig. 13. Cáliz con el ovario oculto en él y el estilete, que sobresale; aumento lineal 2. Fig. 14. Parte de la corola con un estambre corto, vista de perfil, para demostrar la inserción de este en el tubo; aumento lineal 2. Fig. 15 y 16. Una baya madura, vista de dos lados dis- tintos ; tamaño natural. Fi(j 1 S. Lychiiii "lonyalo-cestroides . Fi().8-16. L\ciumi clüiuialuin WJ^ (^ D ü.^?,^-íf '(M boletín m^j *6 uh; ±jA AC OK CIENCIAS EN CÓRDOBA (REPÚBLICA ARGENTINA.) TOMO IV. ENTUEGA 11. n €3^;í_ wn BUENOS AIRES Litografía. Inipreiitti y Riicuadernaciun de Guillerinc Kraft Callt; Kecüiuiuistíi 02 1882. .D ai rímh boletín DE XjA AC 1, IL DE CIENCIAS EN CÓRDOBA (REPÚBLICA ARGENTINA.) TOMO IV. ENTREGA II. BUENOS AIRES Litografía, Imprenta y Encuademación de Guillermo Kraft Calle Reconquista 92 \ 882. CONTENIDO DE LA 2a ENTREGA DEL TOMO IV. PARTE OFICIAL. Página Óscar DoeriNG, Algunas Observaciones sobre la conveniencia' de fundiu- un Observatorio Magnético Nacional XXIIl Nómina de las publicaciones recibidas por la Academia desde el 16 de Mayo al 31 de Diciembre de 1881 LXVIII PARTE CIENTÍFICA. Enrique I.YNCh ArribÁLZAGA, Catálogo de los Dípteros hasta ahora descritos que se encuentran en las Repúblicas del Rio de la Plata 109 Eduardo Ladislao Holmberg, Observations a propos du sous-ordre des Araignées Territelaires (Territelariae) spécialment du genre Nord-Américain Catadysas, Hentz et de la nouvelle famille Mecicobothrioidae, liOLMB. (avec I planche) ,, 153 Óscar Doering, Medición Barométrica de algunas alturas de la Sierra de Córdoba 175 O. NORDSTKDT, Sobre algunas Alg;^s de la República Argentina 181 Gil a. R. Smit, Bronquitis ocasionada por Strongylus Filaria Dies 188 P. T. Cleve, Determinaciones de Diatomáceas de la República Argentina 19 1 Algunas Observaciones sobre la conveniencia de fundar un Observatorio Magnético Nacional por (p í ^ X Osear Doering. Las miradas del mundo científico están fijas, en este momento, sobre la Nación Argentina, esperando su actitud en uii asunto de importancia trascen- dental para la ciencia en general y especialmente para la física del globo. Las principales naciones de Europa y los Estados L^nidos de Norte-América se han convenido para realizar una idea digna de los entusiastas esfuerzos de tantos países. La coo- peración de la República Argentina es deseada con la mayor ansiedad, y los corifeos de la ciencia se empeñan para que ella preste su valioso concurso. ;De qué se trata .'^ En el Congreso Meteorológico Internacional, reu- nido en l^oma, en el mes de Abril de 1879, el teniente de navio austríaco Dr. Weyprecht , cono- cido con]o uno de los mas célebres é ilustrados exploradores de las regiones polares, propuso un proyecto tendente á conseguir que se estableciesen varios observatorios en las zonas árcticas y antarc- ticas, á fin de organizar observaciones meteoroló- gicas y magnéticas liorarias que se efectuasen simultáneamente al rededor de los Polos. Weyprecht creyó oportuna su proposición en vista de una expedición al Polo Norte á cuya ca- beza se encontraba, y que era costeada por un particular, amante de la ciencia, el conde austriaco ¡uan Wilczck. El Congreso de Roma adoptó una resolución en la í]ue reconocía la grande importancia científica del proyecto presentado, y recomendaba á todos los gol)iernos prestasen su más eficaz ayuda á se- mejante empresa. A la vez encargó á su "Comité Internacional Permanente" para que convocara una confisrencia ad /loc, compuesta de los delegados munidos de los poderes c instrucciones de los go- biernos que de algún modo creyesen poder parti- cipar en esta empresa. Kn efecto, no tardó en reunirse la primera "Con- ferencia Polar Internacional" en Hamburgo, los dias 1 al 5 de Octubre del mismo año, á la cual si- guieron otras dos más, la segunda en Berna, del 7 al 9 de x^gosto de i88o, y la tercera en San Petersburgo del i al 6 de Agosto de l88i. De las actas de esas Conferencias, y de declaraciones posteriores de algunos gobiernos, consta que está asegurada la realización de la grandiosa idea del Señor Weyprecht, no obstante la muerte prema- XXV — tura de este eminente explorador, por la (|ue todo el mundo científico está de duelo. "La idea de Weyprecht". — dijo el Presidente de la última Conferencia el Dr. H. Wild al hacer la necrología de aquel, — "debe ser buena y feliz, "pues ha sobrevivido á las calamidades de la guerra, "á las discordias de las naciones, á los obstáculos "de las envidias humanas y hasta á la muerte de "su autor". No está demás reproducir aquí las palabras sen- cillas con que la primera Conferencia dá á entender el gran valor científico de esta empresa gigantesca: "Para justificar la importancia de la empresa, "debemos hacer valer: a) bajo el punto de vista "de la ciencia del magnetismo terrestre, (|ue, las "observaciones simultáneas en las estaciones i)olares, " — las que deben ser elejidas sobre una base de "normas determinadas ])ara el desarollo del estudio "de las perturbaciones en los elementos magnéticos "y de las relaciones que median entre ellos, la "luz polar y las manchas solares, — son una con- "dicion sin la cual no se puede esperar un pro- "greso decisivo de nuestros conocimientos; b) que, "con el objeto de llegar á conocer la distribución "de la fuerza magnética y de sus oscilaciones se- "culares y demás, no se oculta la imperiosa nece- "sidad de emprender profundos estudios en una "época determinada de la actualidad". — XXVI (Véase "Rapport des discussions et des résolu- tions de la Conférencc Polaire Internationale tenue á Hambourg du 1*"' au 5""' Octubre 1879", page 5)- Conviene dar un breve resumen de las resolu- ciones principales que están por ejecutarse por los participantes, á fin de poder apreciar con más acierto lo grandioso de la idea de Weyprecht, y las consecuencias de la empresa. Los Estados Unidos se han comprometido á establecer dos estaciones polares, una situada en Punta Barron, y la otra en la Babia Lady Frank- lin; Inglaterra establecerá una en el Fuerte Simp- son; Rusia otra en la embocadura del Rio Lena; Holanda en el Puerto Dickson ó en Nowaja Semlja; Dinamarca en la banda Oeste de Groenlandia Austria ( — ¥A Conde Wilczek — ) en Tan Mayen Suecia en la Bahía Mossel; Noruega en Bossekap [ ] probablemente P\-ancia una en un punto cer- cano al Cabo de Hornos; Italia en Patagonia; [Ale- mania en una de las islas de los mares australes, Sud-Georgia]. Todas estas estaciones principiarán sus obser- vaciones el primero de Agosto de 1882, ó poco des- pués, y las terminarán el 1° de Setiembre de 1883. Dejando á un lado las observaciones meteorológicas y concretando nuestra atención tan solo á las del magnetismo terrestre, vemos que se impone á todas — XXVII — aquellas estaciones el deber de determinar cuantas veces fuese posible, la declinación, inclinación e in- tensidad horizontcü absolutas del mas^netismo ter- restre, y de observar á cada hora , de dia y de noche, las variaciones de los tres elementos. Ade- más se observará de 5 en 5 minutos en dos dias de cada mes, determinados anticipadamente, )' hasta cada veinte segundos, cuando menos, la declinación durante una hora igualmente convenida de estos últimos dias. Las observaciones tan frecuentes en ciertos dias se harán no solo ])or las expediciones, sino también, y simultáneamente por todos los Observatorios magnéticos existentes en el globo. ;Cual es el rol reservado á la República Argen- tina en este torneo científico de las naciones, tor- neo en que los hombres de la ciencia se exponen con entusiasmo á las asperezas de un clima glacial, olvidándose del alimento, privándose del sueño, solo para seguir observando el movimiento enigmático de la aguja imantada? El mundo conoce ese rol; las Conferencias Polares lo insinúan: los hombres de la ciencia han hecho un llamamiento á todas las personas de la República que pueden tener in- terés en esta cuestión. Dos naciones europeas invaden el país, estable- ciendo sus estaciones en el territorio de la Repú- blica; ¿continuará ésta indiferente mirando con desden los penosos trabajos de aquellos que XXVIII sacrifican su bienestar, sus comodidades, su sueño, su salud, para resolver un problema científico: (j Acaso nó responderá á ese llamamiento de los pueblos más civilizados del globo, esta nación que ha hecho y si^ue haciendo erogaciones cuantiosas por su Observatorio Astronómico, su Academia de Ciencias, sus Museos y sus exploraciones en el in- terior del país? Esta nación cjue sin duda, figura ya entre las que con justos títulos hacen gala de su amor á la ciencia — única entre todas las de Sud-América (|ue ha protejido y fomentado enérgicamente las ciencias naturales — debe seguir el noble ejemplo, no ya solamente de las naciones más civilizadas del globo, sino hasta de los particulares, como el Sr. Smith en Suecia y el Conde Wilczck en Austria, los cuales con tanta decisión y entusiasmo, han puesto manos á la obra en esta grandiosa jornada de la ciencia moderna, sacrificando una fortuna. No ha de dejar de contribuir, asi lo esperamos, al estudio de ese fenómeno maravilloso que ocupa, hace siglos, la atención de los sabios. ¡Oigamos lo que aconsejan las Conferencias Po- lares, leamos lo que solicitan las celebridades en el ramo del magnetismo terrestre, y pongamos ma- nos á la obra antes que pase la hora! Dice la resolución l6 de la Conferencia de Hambursio : — XXIX — "Para poder obtener, cumpliendo el programa "convenido, contribuciones tan completas como "sea posible para la solución de las cuestiones me- "teorológicas y magnéticas en toda la superficie del "dobo, se ruega al Comité Internacional Meteoro- "lógico: "í7^; ''b) que se empeñe en oportunidad, no solo "para que la actividad de las estaciones meteoro- " lógicas y magnéticas se propague en el mayor "grado posible durante la época elegida para las "observaciones, sino también para que se establezcan "observatorios provisorios donde no existan comu- "nicaciones seguras entre las estaciones proyectadas "en las regiones árcticas y antárcticas y los obser- "vatorios existentes actualmente en las zonas tem- " piadas". En el informe presentado á la segunda confe- rencia reunida en Berna, el presidente de la mis- ma, Dr. Neumayer, Director del Observatorio Cen- tral de Hamburgo, se expresa como sigue: "El proyecto fué también comunicado á Sud- "x\mérica (Confederación x\rgentina) y á Australia, "repartiéndose allí el informe; ademas el presi- "dente trató de trabajar allí en el sentido de "la Comisión; con este objeto se dirigió á perso- "nas que se hallaban en condiciones de interesarse "en la realización del [)royecto. — XXX — "Estas comunicaciones tenian un carácter esclu- "sivamente privado; pues el presidente no ha creido "de su competencia dirigir invitaciones oficiales á "los institutos científicos, ni mucho menos á los "gobiernos; tampoco ha creido conveniente hacerlo "á causa de la poca seguridad del asunto en los "países representados en la Conferencia." Una resolución de la misma conferencia dice: "En cuanto á los países que no estaban repre- " sentados en las conferencias de Hamburgo y "Berna, la Comisión pide al presidente que mande "las actas de las sesiones y los informes á los "institutos científicos y personas mas influyentes, "con una nota en la ([ue les pida su cooperación "eficaz." Hay que citar, además, una resolución de la conferencia de San Petersburgo: "Ea conferencia pide á su presidente, dé los "pasos necesarios para que los directores de los "diferentes obser\'atorios v especialmente de ¿os '"' situados en e¿ hemisferio austral ayuden en lo "posible á la empresa común, instalando observa- "ciones simultáneas. Además, ruega á su presidente "que continúe sus trabajos tendentes á atraer el "concurso de aquellos institutos y personas cuya "participación en la empresa se pueda esperar "todavía." De estas citas se deduce (juc las conferencias XXXI — polares desean el concurso del mayor número po- sible de paiscs para garantir el mejor éxito. ;Pero por que han ñjado sus ojos con preferen- cia en la participación de Sud-America, más espe- cialmente en la de la República Argentina? Lo es- plicaráii las c¿irtas siguientes, á cuyos autores agra- dezco el permiso de poder publicarlas si las circun- stancias lo recomendasen ó exigiesen. Al Dr. D. Osear Doeíang — Córdoba. Señor de todo mi apreeio: "No puedo dejar pa,sar mas tiempo sin volver "á preguntarle si no dispone todavía de los medios "de practicar estudios y observaciones acerca del "magnetismo terrestre, para hacer lucir sus dotes "intelectuales también en este terreno. Sin duda "el Gobierno Argentino realizará una obra de gran "mcTÍto, y se hará acreedor al aplauso entusiasta "de todo el mundo científico, si tuviese á bien "acordar los fondos para la fundación de un obser- "vatorio magnético en el cual se emprendiesen "observaciones sobre la intensidad, declinación e "inclinación, así como sobre las variaciones de la "intensidad y declinación. "En este caso, Vd., mi querido Dr., tendría un "campo muy extenso para su actividad científica, "y podría contribuir espléndidamente al estudio de "la fuerza mencionada. En atención á lo que — XXXII — "acabo de decir, yo, en su lugar, pondría en juego "todos los resortes á su disposición para conseguir "del Gobierno los recursos necesarios á tan impor- "tante obra. "Si yo me hubiese pronunciado en este sentido "unos cinco años antes de hoy, no habrían faltado "talvez (?) quienes me culpasen de propósitos par- "ticulares; pero habiéndome retirado completamente, "como Vd. sabe muy bien, de los talleres que "llevaban mi nombre, y dejado de aceptar encargos "de instrumentos de cualquiera clase dedicando todo "mi t'cmpo al Instituto de Física de esta Universidad, "no necesito asegurarle que ningún otro motivo "me impele á escribirle, sino un interés puramente "científico. Si los pasos que Vd. diese acerca de "su Gobierno, tuviesen un resultado favorable lo "que no dá lugar á dudas — pongo gustoso á su "disposición mi esperiencia y mis consejos para la "instalación y arreglo de un observatorio magné- "tico, con tal que Vd. lo desee, pues hace 47 "años que me han ocupado tales arreglos y los "instrumentos magnéticos. "Es con motivo de las expediciones polares que "principiarán en el año 1882, que se me ocurre la "idea de llamar su atención sobre lo expuesto jus- "tamente ahora, en tiempo oportuno. "Hablé sobre la conveniencia de establecer un "observatorio magnético en Córdoba, con el Dr. — XXXIll — "Rieckc, que reemplaza á nuestro Weber en la "cátedra y dirección del Instituto de Física, y me "es grato poderle asegurar que él es en todo de "mi opinión. A mi pedido me ha comunicado su "juicio por escrito; tengo el gusto de adjuntar á " \d. su carta. "Actualmente me encuentro sumamente ocupado "á causa de la Exposición de Electricidad y Mag- "netismo que tendrá lugar en Paris. Cumpliendo "una indicación de Weber, el Instituto de Física "(juiere exhibir también á mas de otros aparatos "magnéticos, el magnetómetro en la nueva forma "que yo he ideado y descrito. Pero hay que vcri- "ficar todavía muchas modificaciones en el instru- " mentó que existe en el Instituto, trabajo que he "encomendado á los mecánicos Bartels y Diede- "richs, residentes en está. "Le ruego acepte bien estos renglones y me haga "el favor de manifestarme su opinión al respecto". Con toda distinción lo saluda — Dr. Meyerstein. (iotinsa. V de Junio de 1 88]. A/ Señor Dr. Meyerstein — Presente. Gotinsa, 24 de iMayo de 1881. Distinguido Dr. : "Respecto á la importancia de las observaciones "sobre el magnetismo terrestre en la República — XXXIV — "Argentina, hay que fijar la atención en los dos "puntos siguientes: "i'' Las observaciones de esta clase practicadas "en el hemisferio austral, están á un nivel muy "bajo tanto en cantidad como en calidad, en com- "paracion con las que se han hecho en el boreal. "Por consiguiente es de una importancia trascen- "deiital, la creación, en el territorio de la Nación "Argentina, de un observatorio magnético, y que "este sea montado á tal altura que los trabajos "que en el se llevasen á cabo, tengan un valor "tan fundamental como los (|ue provienen de los "observatorios europeos de primer rango. "2" Las expediciones científicas del año l8b2 á "los polos Norte y Sud (jue se costean colectiva- " mente por los gobiernos de Holanda, Italia, Dina- " marca, Rusia, Francia, Noruega, Alemania, Austria, "Suecia (y los Estados Unidos) tienen por principal "objeto el estadio del magnetismo terrestre. Tales "observaciones no pueden producir resultados de "un valor universal, sino cuando todos los obser- "vatorios existentes en los continentes tomasen "parte en el trabajo común. Ademas de la Ciu- "dad del Cabo de la Buena Esperanza y Australia, "se puede tomar en consideración en el hemisíerio "austral, solamente la República Argentina, situada "mas ó menos bajo la misma latitud que aquellos "en donde, teniendo en vista el Observatorio Astro- — XXXV — "nómico de Córdoba, que goza ele una dirección "tan excelente, se puede esperar una garantia mas "de la seguridad y valor de los resultados obtcni- "dos. Seo-un veo en el informe de la seuunda "Conferencia Internacional Polar de Berna, se ha "tomado yá la resolución de insinuar al Gobierno "Argentino el importante servicio que prestarla á "la ciencia fundando un observatorio magnético, v "de tratar de obtener el valioso concurso de la "República Argentina en la común empresa. Lo saluda respetuosamente S. S. Eduardo Rifxke. Párrafos de una carta del Dr. Neumayer de Hamburgo al mismo, fecha 19 de Setiembre de 1881: Sobre la importancia de establecer un "observatorio magnético en la parte meridional de "la América del Sud, no puede existir ninguna duda. "Yo mismo me he pronunciado decididamente sobre "este tema en distintas ocasiones, y recien — hace "6 ó 7 meses — una vez mas en una nota diri- "gida al Barón de HoUeben, el Ministro Residente "de Alemania en Buenos Aires. Hace mas de dos "años que me dirigí al mismo en una comunicación "muy extensa pidiéndole interpusiera toda su iníiuen- "cia para asegurar el concurso de la República "Argentina en las obser\aciones simultáneas durante XXXVI -- "el tiempo de las expediciones polares iiiternacio- "nales. Aunque tenemos la esperanza de que la "l^-ancia establecerá una estación magnética en el "Cabo de Hornos, se necesita sin embargo una "estación situada mas próximamente á las regiones "subtropicales, y por lo tanto es menester poner "en acción todos los medios disponibles para que "la idea del Dr. Doering se realice". Comisión Polar Alemana. Hamburgo, lo de Febrero de 1882. Al Dr. D. Osear Do eringe catedrático de Física de ¿a Universidad Nacional de Córdoóa, y acttial Presidente de la Academia N'acional de Ciencias. Muy señor niio y de todo mi api-ecio: "Con gran sentimiento de mi parte, no me ha "sido posible darle hasta hoy una contestación á "su nota fecha I" de Agosto del año pasado; "pues, hasta hace poco tiempo la participación del "Imperio Alemán en las expediciones polares inter- " nacionales no estaba aun segura, y por lo tanto, "yo mismo, no podia entrar en la arena en sosten "y recomendación de su idea. Recien ahora se han "acordado los fondos para la equipacion y fomento "de las expediciones. "Hace bastante tiempo, que tuve el honor de "enviarle las actas de las tres conferencias polares XXXVII "internacionales de Hamburgo, Berna y San Peters- " burgo, en la esperanza de que Vd podría hacer "uso de ellas en sus trabajos dignos de elogio, "tendentes á conseguir la creación de un Observa- " torio Magnético en la República x\rgentina. "Ayer despaché por el correo, á su dirección, "un ejem])lar de nú conferencia científica desempe- "ñada ante el Congreso de Naturalistas en Danzig, "ademas de una memoria escrita por mi sobre el "asunto que nos ocii])a. Espero que esta remesa "estará en su poder al recibir estas líneas. Me "permito llamar especialmente su atención sobre las "proposiciones que hago en la página 7 de mi "obra recien citada, al sentar las cuales, he parti- "do de la suposición de que el Gobierno de la "República Argentina se hallaría dispuesto á esta- "blecer un observatorio magnético. La importancia "de un Instituto de esta clase en Córdoba, se "acentúa ahora tanto mas cuanto que el hemisferio "austral estará muy mal dotado de observatorios "magnéticos durante la gran época de las observa- " clones magnéticas siiuultáneas, de Setiembre de "1882 al de 1883; y hasta en las latitudes bajas "se puede esperar muy poco al respecto. "En este estado de cosas, tengo autorización "para ])oner á su disposición, prestado por el "Gobierno Alemán, un juego de aparatos de La- "mont para que Vd. pueda observar las variaciones — xxxvriT "durante el tiempo que duren las expediciones "polares. Pero le observo que la colocación de "estos aparatos debe hacerse en una sala abrigada "contra la influencia de la temperatura, es decir, "en una pieza subterránea. Esas observaciones no "tendrán un valor universal indisputable, sino cuan- "do se verifica, de vez en cuando, una determina- "cion del punto cero de los aparatos por mediciones "absolutas. Siento no poder poner á su disj^iosicion "un teodolito magnético; Vd. debe empeñarse para "que su Gobierno acuerde los fondos necesarios, "tanto para esta clase de instrumentos, como para "la instalación del observatorio. "La expedición Alemana destinado á Sud-Georgia, "hace escala en Montevideo á mediados de Junio; "es]:)ero, que ella tendrá ocasión de practicar allí "algunas observaciones magnéticas: á la vez, la "misma podría entregarle á Vd. los instrumentos "de variaciones, si hay esperanza de su participa- "cion en la tarea común. "Antes ya el Ministro Residente, Barón de Hol- "leben ha manifestado su buena disposición de "prestar su ayuda á los trabajos para la explora- "cion de las regiones antárcticas, y puesto que Vd. "mismo según veo en su carta, ha entablado cor- "respondcncia con este señor sobre la creación de "un observatorio magnético, el auxilio de éste tan "bien ciispuesto y con cuya amistad personal me — XXXIX — "honro, nos será, sin duda, de gran utilidad en los "trabajos tendentes á obtener el concurso tan de- "seable del Gobierno Arsfentino. "Dentro de pocos dias volveré á escribir al "Barón de Holleben sobre el mismo tópico. "El programa de las observaciones magnéticas "le es conocido por las actas de la Conferencia "Polar de San Petersburgo ; yo saludaría con júbilo "la noticia de que el Gobierno Argentino se halla "dispuesto, merced á sus empeños (por los que le "queda reconocido todo el mundo científico) á de- "cretar los fondos que le pondrían en condiciones "de establecer el observatorio magnético v de ad- "quirir un número suficiente de colaboradores para "poder ejecutar el programa completo. "La importancia de las investigaciones magnéticas "en Sud-América, mientras esté ejecutándose el "plan grandioso de las exploraciones polares, no "necesita ser mas detalladamente desmostrada; asi "mismo salta á los ojos de cada hombre de ciencia "versado en la materia. Pero también para el fu- "turo, y á fin de conseguir una serie continua de "observaciones magnéticas fundamentales, existe "apenas, en los climas templados, un lugar mas "importante que Córdoba. "Con íntima satisfacción suludaré el día en que "Vd. me pueda comunicar que sus empeños, que "aplaudo de todo corazón, han tenido un buen re- XL "sultado. Con entusiasmo contribuiré en lo que "pueda á la realización de su idea. "Esj)erandi) una j^ronta y uivorable contestación "de su parte, me suscribo con todo mi respeto — Suyo — Dr. G. Neumayer, "Presidente de la C()nilsif)ii Polar Alemana". Podria citar aquí ni'jchos párrafos de otras car- tas (|ue he recibido y sigo recibiendo, de los cen- tros científicos de Europa, aplaudiendo mi idea de la que tienen conocimiento, y pidiéndome que no descanse para conseguir que ella se convierta en un hecb.o. En \'ez de todo eso, traduzco la opinión de una de las ])rimeras autoridades científicas, — la del Dr. Hann en Vicna. emitida en el ])eriódico de la Sociedad Austríaca de Meteorología, año i88i, pag. 468. El autor, después de informar sobre las ])rincipales resoluciones de la Cor¡rerencia Polar de San Petersburgo, dice así: "Seria de una especial importancia la existencia, "en la parte meridional de Sud-America, de un "observatorio magnético, puesto que exi.ste uno "solo de esta clase en todo el hemisferio Sud, — "el de Melbourne, es decir, á una distancia casi de "180 orados de lono-ítid á contar desde los' meri- "díanos de la Patagonia. Talvcz el Gobierno de "la República Argentina, en vista del alto interés "(|uc tendrán observaciones magnéticas simultáneas XLI "en Sud-AiPicrica, se hallará dispuesto cá proveer el "Observatorio Nacional tic Córdoba, de instrumeiitos "magnéticos. La Universidad de Córdoba cuenta "con varios sabios muy activos, de los cuales sin "duda, alguno se encargaría de las observaciones, "en caso de que el Dr. Gould, [K)r sus muchos "trabajos en otros ramos de la ciencia, se hallase "inhabilitado para tomar sobre sí también las obser- "vaciones magnéticas. Aunque no se puede esperar "que en este tiempo tan corto sea posible esta- "blecer y hacer funcionar con regularidad unos "aparatos que registren fotográficamente, seria, no "obstante, de sumo interés observar los aparatos "de variaciones ideados por Lamont en los dias y "horas prescritas por las conferencias internacio- " nales". Basta de citas. jCuienes son lus hombres que aconsejan tanto la instalación de un observatorio magnético en la República Argentina y especialmente en Córdoba.'^ El Dr. Neumayer es nada menos que el Presi- dente de las dos conferencias polares de Hamburgo y Berna, y si añadimos que el es el hombre á cjuien el Gobierno Alemán ha conferido la dirección de todo su servicio meteorológico, no necesitamos re- cordar la foja de servicios que el tiene prestados á la ciencia para demostrar que su palabra se puede llamar verdaderaoiente autorizada. Las pa- — XLII — labras del Dr. Hann tienen el mismo peso, pues no hay meteorólogo en el mundo que no reconozca esta autoridad. Es el director de la Oficina Cen- tral de meteorología y magnetismo terrestre de Austria, á la vez que redactor de una de las publica- ciones meteorológicas mas importantes de la actua- lidad. ;Quc diré del Dr. Meyerstein, cuyo nombre está tan estrechamente vinculado á los progresos del estudio del magnetismo terrestre, y cuya vida entera se ha dedicado al perfeccionamiento de los aparatos destinados á ese estudio .^^ Si Gauss y Weber han creado una base científica para el estu- dio de esta fuerza, Meyerstein há sabido dar forma práctica á sus planes, ideando los aparatos que hoy dia sirven de modelo en la observación del magne- tismo terrestre. El Dr. Riecke es el reemplazante del mismo Weber , cuya invención , — la aguja guiada por corrientes de inducción, une hoy los continentes separados por el mar, y el director de aquel Observatorio Magnético de Gotinga, que supo reunir por primera vez en una empresa internacional científica, la "Sociedad Magnética", pueblos sepa- rados por rivalidades, cosa inaudita en aquella época. Alejandro de Humboldt dirigió una carta al du- que de Sussex, entonces presidente de la "Roy al Society of London" encareciéndole la importancia de las observaciones magnéticas, y en vista de esta, los gobiernos de Inglaterra y Rusia se apre- XLIU — suraron á cubrir su territorio con una espesa red de observatorios magnéticos. ¡Ojalá la palabra de todos aquellos sabios cuyas opiniones acabo de re- producir, tuviese la fuerza de crear un solo insti- tuto de este clase en la República Argentina! ;Oué ventajas reportaría la República x\rgentina si estableciese un observatorio magnético en su terri- torio? Esto se pregunta siempre cuando se trata de una empresa de cualquiera clase, y lo mismo puede preguntar con derecho el Gobierno, al cual se insi- núa la creación de un nuevo instituto científico. La pregunta equivale á examinar el provecho que una Nación obtiene de la existencia de tantos institutos dedicados al estudio de las ciencias natu- rales, ó á entrar á discurrir sobre la utilidad de estas ciencias en general. Es una verdad palpable que todos los progre- sos de la sociedad moderna están basados en el desarrollo de las ciencias naturales. Ademas, estas ciencias están tan íntimamente lÍ2:adas las unas con las otras, que descuidar una de ellas es impedir la benéfica influencia de las demás. Sin embargo dejo la palabra una vez mas al Dr. Neumayer reproduciendo unos párrafos de su conferencia arriba citada: "Tratándose de solicitar y conseguir del Gobierno "unos fondos tan importantes como en el caso — XLIV -- "que nos ocupa, me parece conveniente, por no "decir un deber, decir también una palabra sobre "las ventajas prácticas que han de emanar de la "empresa. En semejantes casos se recomienda "hacer presente cuánto aquellas ciencias, de cuyo "foniento se trata en primer lugar p(^r una explo- " ración polar sistemática, han producido ya de út^l "para la vida práctica, y que ventajas ha producido "para la sociedad el cultivo de aquellas. Recor- " demos aquí, ante todo, la Meteorología. No me "he propuesto considerar aquí la gran importancia "de los estudios metcreológico- climatológicos que "se han hecho desde fines del siglo pasado, para "la vida pública y las ocupaciones diarias de las "distintas carreras y profesiones. Permitidme mas "bien, hablar sobre un servicio que la meteorología "ha podido prestar al tráfico marítimo de la hurna- "nidad, y el que se comprende mejor si se considera "que .atriota. Un país bien conocido en el mundo por su fomen- to de las ciencias exactas; una nación que ha mandado sus representantes oficiales ó voluntarios á todos los congresos científicos; un pueblo que ha palpado ya los inmensos beneficios de tales conxenciones internacionales, está llamado á no es- cluirse de una empresa de tanta imjjortancia. Solo los miopes no podrán imaginarse los bene- ficios de tal actitud porque están mas allá de su \ista: los que rigen los destinos de la República, fijando la mirada en el porvenir , descubrirán los beneficios que su participación en esta obra traerá al crédito del país y á su posición en la historia, y no dejarán de poner su ejército auxiliar al ser- vicio de una empresa que cubrirá de laureles se- guros á la República Argentina. Y si la participa- ción de esta es tan necesario |)ara conseguir resultados universales, que dos naciones europeas, — la Francia y la Italia — establecen observatorios en territorio argentino, y una tercera, la Alemania, ofrece los instrumentos á un empleado de la Na- ción para que se observe siquiera en el centro de LII la República, la Nación tiene el deber sagrado de no dejar fracasar los esfuerzos de las principales naciones del mundo, absteniéndose de su concurso. El mundo científico saludará con verdadero júbilo el dia en que le llegue la noticia de que la Repú- blica x\rgcntina, comprendiendo la misión que su rango y su rol en la historia le imponen, va á participar de los sacrificios y de la gloria de la empresa internacional. ¡Paz y trabajo! Aprovechemos la época de paz por que atraviesa la República, para trabajar por el desarollo de las ciencias natu- rales, base del progreso material de este y de todos los países! Ya que estamos convencidos de la imperiosa necesidad ([ue la República Argentina se enrole en las filas de los expedicionarios de la ciencia, es menester examinar los sacrificios que le costará su participación. No se ha solicitado que la Nación costee una expedición á las zonas antarticas, se le insinúa un gasto mucho menos considerable, — la instalación de un observatorio magnético en sus propias comar- cas para hacer estudiar durante un año el magnetismo terrestre, tarea hasta hoy no practicada en el territorio argentino y cuya realización exigirá algún dia el progreso del pais, aun cuando no se tratase de la empresa internacional que nos ocupa con Lili — ])referencia. En efecto, una nación que hace con tanta liberaliciad estudios hasta del cielo de Sud- Anicrica, tiene que dedicar una atención preferente á los problemas científicos que su exclusiva propie- dad, su suelo, su fauna, su flora presentan y á los que tienen una influencia mas ó menos directa en su bienestar; en una palabra ella debe estudiar y reconocer ante todo sus condiciones físicas, de cuya distribución y suma depende el porvenir de cada pais. En esta clase de problemas entra tam- bién el estudio de las manifestaciones del magnetismo terrestre, antes parte de la física, hoy dia una ciencia independiente; lo mismo que su hermana, la meteorología. Así lo han comprendido todas las naciones mas importantes del mundo, y hasta del Japón conocemos el valor de los elementos del magnetismo terrestre. El Brasil está por dedicarse al mismo trabajo, pues el físico que concluyó la cartografía magnética del Archipiélago Indico, se ha trasladado al territorio del vecino imperio para emprender allí la misma tarea. La conveniencia de levantar un mapa magnético de la República, resalta tanto mas, cuanto que las descripciones físicas del país, subvencionadas por el erario de la Nación, las de Martin de Moussy y de Burmeister, no han podido decir palabra alguna sobre las manifestaciones del magnetismo terrestre en el pais, y no puede haber tiempo mas oportuno LIV para llenar ese vacío que el actual: el Instituto Geográfico Argentino prepara un mapa topográfico del pais entero construido sobre la base de los planos de todas las provincias; el l)r. Brackebusch otro igual que contenga, además de esos datos, los resultados de sus numerosas mediciones propias ejecutadas en todo el interior de la República y sus condiciones geológicas; la Oficina Meteorológica bajo la hábil y activa dirección del Dr. Gould añade cada dia nuevos cimientos para la constitu- ción de un mapa meteorológico y climatológico del pais; el Ministerio de la Guerra manda medir y levantar los planos hasta de las mas lejanas comarcas de la República, y exploradores audaces aumentan en favor de la cartografía los conoci- mientos que vagamente poseíamos de territorios hasta entonces no ])isados por el hombre civilizado. ¿Puede haber un momento mas oportuno para hacer algo en la ciencia del magnetismo terrestre que tiene la misma importancia (¡ue las demás ciencias naturales, cuyas manifestaciones son nna parte integrante, tanto de la geografía como de la física? Lo dudamos. Estas razones de gran peso y ({ue han encon- trado un eco en las manifestaciones de las celebri- dades cuyas palabras reprodujimos mas arriba, nos inducen á abogar por la creación de un observa- torio magnético permanente^ en el interés del pais. — LV Es verdad (|ue un observatorio construido para el termino de un año basta para cuni])lir el pro- grama completo de las conferencias polares en la parte c|ue se refiere al magnetismo terrestre; sin embargo, examinando el asunto bajo otras faces, es evidente que la República obtendrá las mayores ventajas para su exploración científica, con solo establecer un observatorio permanente; agregando á esto, que los gastos de su fundación e instalación exceden en muy poco á los de un observatorio destinado á funcionar solo un año, pues, como lo veremos mas adelante en los dos casos se necesitan edificios en ciertas condiciones requeridas por la naturaleza del magnetismo terrestre, edificios que no existen todavía, y que una vez levantados, quedan sin aplicación pasado el año de las obser- vaciones internacionales. Lo mismo se puede decir respecto de los instrumentos que en los dos casos son los mismos: si se compran una vez estos aparatos tan costosos conviene proseguir las obser- vaciones durante unos años mas. Por otra parte, el instituto estará tan recargado de trabajo, á causa de las exigencias del programa internacional, que no podrá dedicarse, durante aquel año á ninguna de las investigaciones que convienen con . preferencia y particularmente á los intereses de la República. En un año se puede determinar á penas la va- — LVI — riacion diurna de los elementos magnéticos en el punto donde se establezca el observatorio, y por consiguiente mucho menos la marcha anual y las oscilaciones seculares; no le queda tiempo á un instituto transitorio para estudiar los elementos en otros puntos del país á fin de construir un mapa magnético; no podrá dedicarse al estudio de las corrientes terrestres que originan tantos obstáculos al servicio telegráfico. Y estas tareas de un obser- vatorio magnético son precisamente aquellas en cuyo estudio y aclaración la República tiene un in- terés especial. En resumen diremos, que si bien resulta econo- mía en favor de una estación provisoria, por otra })arte el exceso de gastos causado por la fundación de una estación permanente, se recompensa con las inmensas ventajas que la República obtendrá de él; mientras que un instituto provisorio ha de su- ministrar datos valiosos á la empresa científica in- ternacional, pero menos importantes para las exi- gencias del país. Conviene observar aquí que en vez del uso de la expresión "observatorio permanente", entendemos un instituto que funcione algunos años. Según el autorizado juicio de los celebridades en el ramo, un término de 5 á 10 años es suficiente para el estudio completo de las manifestaciones del magne- tismo terrestre en la República, de suerte que los — LVII — gastos de instalación y conservación del instituto son un sacrificio pasagero para el erario de la Nación. Cualquiera que sea el temperamento adoptado, en los dos casos se necesita la adquisición de un terreno espacioso, apartado de caminos muy fre- cuentados, de casas habitadas, y, ante todo, de grandes masas de hierro, á saber, rieles, fábricas, etc. Todas estas condiciones del terreno son indis- pensables, por una parte, para evitar movimientos ó sacudimientos del suelo, que amenazan la seguridad é inmovilidad de los instrumentos y el resultado de las observaciones, y por otra parte, para sus- traerlos á las influencias magnéticas locales cjuc alteran las manifestaciones del magnetismo terrestre. Para observar las variaciones del fenómeno, bajo sus tres faces, la declinación, inclinación é intensi- dad, se necesita un edificio construido ad hoc. Todos los materiales empleados en su construcción han de ser libres de magnetismo; todas las herra- mientas necesarias, chapas, pasadores, clavos, etc., de cobre ó bronce, libre de hierro. Ademas de esas exigencias su construcción ha de ser tal que se elimine en lo posible la oscilación diurna de la temperatura. La estabilidad ó cons- tancia de la temperatura es una condición indispen- sable para la exactitud de las observaciones de las variaciones, porque las dificultades de calcular y — LVIII — eliminar las influencias de la temperatura sobre los aparatos de magnetismo son muy grandes y casi invencibles en los instrumentos registradores. Solo un edificio subterráneo salva estos inconvenientes, ó si las condiciones geológicas del terreno no lo per- miten, al menos un edificio cubierto por todos lados de una capa de tierra de un grueso tal que las oscilaciones diurnas de la temperatura no tengan acceso al interior del edificio. Así está construido el edificio de variaciones en el observatorio nuevo de Pavvlowsk cerca de San Pctersburgo, que tiene una capa de tierra de 1.5 m. de espesor; los de Greenwich, Kew, Munique, Utrecht y Viena son subterráneos. Si las dos condiciones indicadas son algo difíciles de realizar, por lo demás el edificio es de suma sencillez, componiéndose de dos salas y de dos piezas mas pequeñas. Las dimensiones del edificio deben ser calculadas de manera que los imanes de los distintos aparatos no ejerzan perturbaciones los unos sobre los otros. Aparte de este edificio subterráneo destinado á las observaciones de las variaciones, hay que cons- truir otro que sirve para las mediciones absolutas del magnetismo, para las determinaciones del tienipo y las correcciones del reloj. La absoluta carencia de sustancias magnéticas es también indis¡)ensable en este edificio, pero no — LIX — necesita ser subterráneo. Generalmente son edificios construidos de madera y de una capacidad de tres ó cuatro piezas de diferente tamaño. Lo mas distante posible de estos dos edificios, pero en el mismo terreno, debe levantarse otro que contenga las oficinas y algunas piezas para el director y los empleados del Observatorio. Ora para la mejor vigilancia de los edificios e instru- mentos, ora por razones del mejor servicio, no po- dría faltar esta casa, pues el observatorio debe le- vantarse en un lugar apartado del tráfico, las observaciones han de hacerse de dia y de noche y los instrumentos necesitan una atención especial y continua si se quiere que los resultados sean irre- prochables. Hemos señalado ligeramente el número y dispo- sición de los edificios necesarios para un observatorio magnético, sin entrar en detalles. Antes de saber que el Exmo. Gobierno está dispuesto á establecer tal instituto, y sin conocimiento de las sumas que se destinen para este objeto, es atrevido proponer un plan detallado, porque su realización depende del grado de liberalidad con que el Sup. Gobierno quiera ó pueda proceder. Ademas se necesita un estudio especial de algunos observatorios magnéticos modelos por una })ersona competente en el ramo del magnetismo terrestre. Estos estudios nos pon- drían en condiciones de poder aprovechar, con la LX mayor economía posible, todas las prácticas que se han observado ya al respecto en el transcurso del tiempo, y nos suministrarían un plan detallado y definitivo de la construcción de los edificios. Razones análoaras nos determinan á seouir el o o mismo proceder en la enumeración de los instru- mentos necesarios, reservándonos para mas tarde todas las observaciones detalladas y la indicación del sistema de los diferentes aparatos. Todos los instrumentos necesarios en un obser- vatorio magnético se pueden dividir en dos clases, los destinados á la determinación exacta del tiempo y los de observación. Se necesita en todo caso un reloj astronómico, ya sea para un observatorio permanente ó ya para uno transitorio. Siendo indispensable la existencia de un reloj en los dos edificios de observación, se recomienda la compra de uno eléctrico con sus accesorios. Para la corrección de la marcha de éste, se hace nece- sario un instrumento de tránsito de pequeñas dimensiones ú otro análogo para la observación de las estrellas que sirven á la determinación del tiempo. Los viajes que tienen por objeto las determinaciones absolutas de los tres elementos del magnetismo terrestre, no se pueden llevar á cabo sin el auxilio de uno ó dos cronómetros de la clase que se usan en la navegación. — LXI — Pasando á señalar los instrumentos necesarios para las observaciones, debemos distinguir los de variaciones de los destinados al servicio de las mediciones absolutas del magnetismo. Las expediciones polares llevan un juego de los 3 aparatos de variaciones inventadas por Lamont, los cuales se observan cada hora. Para servirse únicamente de estos aparatos en un observatorio magnético se necesitaría un personal algo conside- rable de observadores, y no obstante las observa- ciones horarias arrojarían muy escasa luz sobre las perturbaciones magnéticas. Preferible es enton- ces el ahorro de los gastos de un personal nume- roso con el objeto de instalar un aparato de variaciones automático que registra fotográficamente. El precio mas elevado de estos aparatos registra- dores de variaciones se recompensa en un solo año con la supresión de algunos empleados de cayos servicios y recompensaciones no se puede sustraer, cuando el observatorio no está dotado de un aparato registrador automático. Además este aparato nos suministra la fiel imagen de cada variación en cada momento: ventaja que por sí sola compensa el mayor costo de dicho instrumento. Para el control de estos aparatos de variaciones sin el cual no tienen valor ninguno para la ciencia, y para las mediciones absolutas de los tres ele- mentos del magnetismo, se necesitan un magneto- — LXII — metro (brújula de declinación y de la componente horizontal de la intensidad), una brújula de incli- nación (') en su reemplazo un inductor terrestre y un magnetómetro bitilar. En los viajes estos ins- trumentos se reemplazan ventajosamente por un teodolito magnético bajo una de las formas que Lamont, Meyerstein, Edelmann y Wild le han dado á este instrumento magnético universal. De las obligaciones que se impongan al observatorio magnético, dependerá si el número de los instrumen- tos que acabo de indicar, ha ó no de ser modificado. Propondríamos que el observatorio tuviese las siguientes obligaciones : 1" Observar con regularidad las variaciones de la declinación, inclinación é intensidad del maonc- tismo terrestre y ejecutar las determinaciones abso- lutas necesarias para el control de aquellas. Los resultados han de publicarse detalladamente. 2^ Determinar la declinación, inclinación é inten- sidad absolutas del magnetismo terrestre en todas las capitales de provincias y demás localidades de la República, en número suficiente para poder construir un mapa que contenga las líneas isogóni- cas, isoclínicas é isodinámicas. Estas determinaciones combinadas con las que están por hacerse en el Brasil, y las numerosas practicadas ya en distintas épocas en los puertos de Sud-América, están lla- madas á aclarar la dirección de aquellas líneas y LXIII — á llevar nuestros conocimientos, sobre la distribu- ción del magnetismo terrestre, del terreno de las suposiciones y combinaciones ingeniosas al de la realidad. Es extraño que en este vasto continente que puede llamarse la cuna del estudio del magne- tismo terrestre á causa de las observaciones fun- damentales que Alejandro de Humboldt practicó en él, la ciencia de esta fuerza magnética ha sido es- casamente cultivada y casi olvidada, 3'' Contribuir, en atención á la posición que la República tiene conquistada ya en el concierto uni- versal de las naciones civilizadas, á la ejecución de todas las medidas internacionales que se tomasen para el estudio sistemático del magnetismo y cor- rientes terrestres. La República se conquistará los primeros laureles en el terreno del magnetismo ter- restre participando de las observaciones simultáneas practicadas durante la época de las expediciones polares, laureles tanto mas seguros cuanto que, por lo que sabemos, no existe ningún observatorio magnético en todo el continente Sud-Americano. 4"^ Hacer un estudio especial de las perturbacio- nes en la red telegráfica de la República. Juzgo innecesario demostrar las inmensas ventajas prácti- cas que el servicio telegráfico obtendría de estos estudios, cuya importancia se ha manifestado en una resolución especial del Congreso Internacional de Eletricidad reunido en Paris el año pasado. — LXIV — Son del Dr. Mascart, director de la Oficina Central Meteorológica de Francia, las palabras si- guientes, con que, en la última sesión del Congreso, resumió las opiniones que él habia emitido al respecto : "Se sabe desde hace mucho tiempo que existe "un estrecho lazo entre las perturbaciones magné- " ticas, las auroras polares y las corrientes que se "manifiestan en la superficie de la tierra. Las "líneas telegráficas forman hoy una red que en- " vuelve al mundo entero, hasta en las comarcas en "que la civilización no ha todavía penetrado, y "constituyen así un inmenso observatorio. Habéis "pensado que la ciencia debia pedir el concurso "de las administraciones de Estado y de las gran- "dcs compañías que explotan las líneas telegráficas, "á fin de utilizar esa red en el estudio del magne- "tismo terrestre. La cuestión presenta un carácter "urgente, si se quiere ayudar á las expediciones or- "ganizadas por la comisión polar internacional para "emprender durante un año, á partir del otoño "próximo, una serie de observaciones simultáneas "sobre el magnetismo terrestre, con estaciones dis- " tribuidas en ambos hemisferios, y tan cerca de "los polos como lo permitan los rigores del clima. "Tales son los motivos de los votos siguientes, "adoptados por el Congreso: "1° Que se tomen medidas por las diferentes "administraciones telegráficas á fin de organizar un — LXV — "estudio sistemático de las corrientes terrestres, "bajo el patronato de un comité internacional. "2° Si no es posible obtener en breve termino "esa organización general, es de desear que, por "lo menos, se hagan observaciones en dias señala- "dos por la comisión polar internacional en la "época de sus expediciones". 5"^ Comparar y rectificar los aparatos megnéticos destinados para la Armada Nacional. ó"" Abrir un curso teórico-práctico para la instruc- ción de los oficiales de la Armada Nacional, de los estudiantes de matemáticas y física superiores ú otras personas que el Gobierno Nacional ó las sociedades científicas del país eligiesen para tomar parte en las expediciones á los mares austi'ales. Las obligaciones que acabamos de proponer en los incisos 5 y 6 no necesitan explicación ninguna: las utilidades para el país, señaladas en sus ren- glones, son á si mismo palpables. Convendría ensanchar las atribuciones del Obser- vatorio magnético por razones de conveniencia y economía, con las dos siguientes: 7"" Observar con regularidad la electricidad at- mosférica y estudiar todos los fenómenos que se relacionan con ella. También esta cuestión fué el tópico de muchas discusiones en el Congreso de Electricidad, de las cuales resulta la importancia de un estudio especial — LXVI — de este fenómeno, que no se ha observado todavía en la República Argentina. 8'"* Observar y estudiar los demás fenómenos meteorológicos bajo el punto de vista de sus influen- cias sobre la agricultura y de la aplicación de sus resultados á este importante ramo de la industria. Casi ningún país europeo carece de un instituto análogo á mas de sus oficinas centrales meteoroló- gicas, cuyas atribuciones se limitan tan solo al fomento de la meteorología, como ciencia pura, y al pronóstico del tiempo. Con el objeto de servir á los fines de la ay;ricultura no se han hecho hasta hoy ningunas observaciones en el vasto territorio de la República, y sin embargo, el porvenir de algunas provincias enteras depende del desarrollo de esta industria. El observatorio magnético podría practicar esta clase de estudios y sería un centro conveniente para organizar una serie de estaciones cuyas observaciones no dependen de la aplicación de caros instrumentos meteorológicos, sino mas bien del celo y contracción de los que se ocupan de la agricultura. Concluyamos manifestando que el lugar mas á propósito para el establecimiento del observatorio magnético es la ciudad de Córdoba. Hemos expuesto la importancia de la empresa internacional á la que se dará principio en este otoño; hemos repetido los deseos de las conferen- — LXVII — cías polares y las opiniones autorizadas de las celebridades en el ramo del magnetismo terrestre, para que la República conozca la actitud que la ciencia y el mundo civilizado esperan de ella; hemos demostrado que la Nación Argentina no puede desconocer sus antecedentes, si ha de pro- gresar en su camino que era el de la protección de las ciencias naturales; hemos señalado las ven- tajas y las glorias que el país llevará, participando en la grandiosa obra, de las naciones mas adelan- tadas; hemos acentuado la imperiosa necesidad, bajo la cual la República se halla, de principiar el estudio del magnetismo terrestre, aun cuando no se hubiesen emprendido las expediciones internacio- nales; y por último, hemos indicado los pequeños sacrificios que la participación del pais imponen al erario. El Gobierno Nacional y los representantes de la Nación han de decidir si conviene ó corresponde á la política del pais seguir por la senda del pro- greso tan felizmente inaugurado. Nosotros hemos cumplido con nuestro deber: el mundo entero aguarda que la Nación Argentina acceda á lo solicitado. Córdoba, Marzo de 1882. Osear DocrÍ7ig, LXVIII — LISTE des publications regues par rAcadémie du 16 Mai au 81 Déceinbre 1881. NOMINA de las publicaciones recibidas por la A.cademia desde el 16 de Mayo al 31 de Diciemlire de 1881. Amsterdam, Berlín, Berlín. Bonn, Bremen, Bruxelles. Aardoijkskundig Genootschap. Tijdschrift Deeí V, N»» 2, 4, 5, 6. Bijbladen van het Tijdschrift 1881 N° 9. A'. Preuss. Akademie d. Wissensch. Monatsberichte. 1880 Decbr. 1881. Jan. — Octbr. Gesellschaft fi'ir Anthropoíngie, Ethnologie u. Urqesclúchte Verhandliingen. 1880: 21 Febr., 20 Miirz. 22 Mai, 12 Jnni, 19 -luni, 17 Juli, 16 Octbr., 7 Nov., 20 Nov., 10 Dec— 1881: 15 Jan., 19 Febr., 19 Marz. i\aturhistorischer Verein der preuss. Rheinlande u. Westphalens. Verhandlungen. 4'^ Folge. Jahrgang 7. 2'5 Halfte. Bonn 1880. Verhnndlungen. 4'^ Folge. Jahrgang 8. 1^'5 Hiilíte. Bonn 1881 . Freytag, Bad Oeynhausen (Rehme) in Westpiíalen. Minden 1880. C. J. Andrae, Die Kafer Westfalens, zu.íammengestellt von Fr. Westhoff. I (Supplement zu Verhandlungen, 4'^ Folge, 8'" Jahrgang). Naturwissenschaftliclier Verein. Abhandhmgen, Band VII, 1, 2. Beilage N? 8 Bremen 1880. Socicté Entomoloqique de Relqiqtie. Anuales, Tom. XXV; Serie III, N°? 1—11, (Année 1881). — LXIX — Buenos Aires, Buenos Aires, Buenos Aires, Buenos Aires, Buenos Aires, Chur Dax, DORPAT, Dresden- Erlangen, Firenze. Sociedad Científica Argentina. Anales Toin. XI, entr. 4. Tom. XII, entr. 1 — 6. Circulo Médico Argentino. Anales Tom. IV, N? 9, N? 12. Tom. V, N? 1—5. Sociedad Rural Argentina. Anales 1881. Mayo— Dicbre. Departamento Nacional de Agricultura. Boletin, Tomo V, N^.^ 4—12. Instituto Geográfico Argentino. Boletín, Tomo II, cuadernos G, 7, 9, 13, 14. Tom. III, cuad. 1-2. Naturforschende Gesellschaft Graahün- dens. Jahresberichte 1878-1879.— 1879-1880. Sociétc de Horda. Ballotin, G^'V'^ année (1831), l^f, 2¿"?^ et 3éme trimestres. i\aturforsc/ier-GesellsGfiaft beider Univer- sitdt. Sitzunosberichte Band V, Heft 3. Naturwissenschaftiiche Gesellschaft al sis». Sitzungsberichte und Abhandlmigen. Jahr- gang 1881, Jan.— Jiini. Physikalisch-Medicinische Societát. Sitzungsberichte 12'*:^ Heft. (Nov. 79— Aug. 80). Societá Toscana di Scienze NaturaU. Atti. Processi Verbali. Adunanzas del di 13 Marzo 18"4. 8 Maggio 1881. Frankfurt a. M. Ph}/sikalischer Verein. Jahresbericht für 1S79-1880. Frankfurt, Jlüí 1881. Frankfurt a. M. Senckenbergisclie naturforschetide Ge- sellschaft. Bericht 1879—1880. Graz. Naturiuissenschaftlicher Verein für Stei- ermark. Mittheilungen. Jahrgang 1880. LXX GUADALAJARÁ. (México) KjÓBENHAVN, Leiden, México, Palermo, ST Pétersbourg, Roma, Roma, Stockholm, Wien, WlEN, Sociedad de biqenieros de Jalisco. Boletín. Tom. í, N° 7—10. K. Danske Yideiiskaherne Selskab. Oversigt over de Forharidliiiger 1880, N?3. 1881., N° 1. 2. Nederlandsche Entomologische Veree- nif/ing. Tijdschrift voor Eiitomologie. XXIV. Aflevering 1^ 2! Ministerio de Fomento. Revista Mensual Climatológica. Tom. I, N° 4. 6. 7. 8. Boletín del M. d. Fom. Tom. VI, X° 71 —80. 86—99. 11(3-143. Colleggio degV Ingegneri ed Architetti. Atti. Anno 1880. Fascñcolo 4. Jardin Imperial de Botaníque. Acta Hoiti Petropolitani. Tom. I. 11. III. IV. V. VI. VII, lasciculus 1.. Supplemeii- tum ad Tom. III. Accademia Pontificia deíNiíovi Lincei. La nuova sede deíle Accademie dell' Arca- dia, d' Archeologie e dei Nuovi Lincei. Roma 1881. Atti, Anno XXXIV, (1^^81) Sessione III. IV. Anno XXIII, sessione 7^ R. Accademia dei Lincei. Transunti, Serie Terza, Vol. V. Fasciculo 7°; 9? — 14? Vol. VI, fasciculo 1? Entomologiska forening . Entomologisk tidskrift. Band I, hiift 1. 2. Zoologisch-Botanische Gesellschaft. Verhandlungen. Band XXX, Jahi-gang 1880. Oesterreich. (¡eseUschaft für Meteoroloqie. Zeitschrift, Jahrgang 1881, Mai-December. -4-H- — LXXI — Berg, Dr. i). Carlos, Buenos Aires. M. A. Apuntes lepidopterológicos 11. III. Revisión der argentinischen Arten der Gattung Cantliaris. (Stett. Entomolog. Ztsclir. ]8=!1. XLII.). Sinonimia y descripción de algunos lieniíp- teíos de Gliile, del Brasil y de Bolivia. Buenos Aires 18^1. Castellanos. Dr. I). N icé foro, Córdoba. Lecciones sobre el Código de Comercio Argentino. Córdoba 1880. Latzina. Dr. D. Francisco, M. A. Buenos Aires. Estadística del Comercio Exterior etc. correspondiente al año 18S0. Stükel. Dr. D. Alfonso, M. C. Dresden. Entdeckung eines neuen Handelswegs íür Süd-Amerika durch Prof. Cari Wiener. (Petermanns Mittheilungen 1881. Heft VI) Venecia. Comisión Directiva del 3<;'' Congreso Inter- nacional de Geografía. Catalogue general des objets exposés. l^r-^ livraison. Venise 1881. Weslev, Willia^n, London. The Natural History and scientific Book- Circular N° 46. 47. London 1881. ^.y^.^^_ im^-f CATÁLOGO DE LOS Dípteros hasla ahora descritos que se encuentran en las Repúblicas del Rio de la Plata LP / ^ ^ POR Enrique Lynch Arribálzaga El relativamente escaso número de Dípteros platenses conocidos pertenece á dos diferentes categorías, á saber: 1^ Especies señaladas ya en esta región. 2^ Especies publicadas como de otros países ameri- canos. vVquellas han sido descritas principalmente por WiEDEMANN, Aussereuropaisc/ic zweifíitgeligG Jnsekten (1828 y 1830), Walker, Descrlplions of Díptera oUccted bij Cpt. Kiny in tlic Surveij of'the StniUs uf Mayelhan (in Trans. of tlie Linnean Soc. of Lond. XVII, 831—359. 1837) y List of the spccimens of Hiptcroiis Insccts in t/ie collcction of the British Museum (1848-1855). Macquart, Dipt'^'res cxotiques nouueaux ou peii connus (1838-1855), IloNDANí, Díptera ali/jiia in Anio^ica Meridiomüi leda a Prof. P. Strohcl (Exlr. Annaario dclla Soc. dei ¡Sutural. in Modenalll. J8G8), Lynch Arribálzaga (Félix), El Naturalista Ar¡¡eiitino I (1878) y el autor de estas páginas (Anales de la Sociedad Científica Arr/entina VH, VIH, IX, X y XI. 1879-1881). líoL Acad. IV. í^ ' / — lio — Las descripciones de las de la segunda categoría se hallan distribuidas en muchas obras diversas, lo cual hace suma- mente penosa la determinación de nuestros Dípteros. Allanar esta dificultad, reuniendo en un solo cuerpo los elementos esparcidos, hame parecido tarea casi indispensa- ble antes de acometer la redacción de una obra monográfica general, análoga, en cuanto sea posible, á la del Dr. Berg sobre los Hemípteros Argentinos, hacia la cual gravitan todos mis esfuerzos actuales; lié ahí la razón que me ha decidido á someter á la crítica el presente catálogo sistemá- tico de nuestros Dípteros, cuyo plan es el mismo, con lige- ras modificaciones, que el observado por mi distinguido colega y amigo el Sr. Barón de Osten Sacken en su excelen- te Catalogue of Ihc descríbed Díptera of ISorlh America (2- ed., 1878). ADVERTENCIA. Las especies observadas por el autor y los nuevos sinó- nimos serán señalados por un asterisco. — 111 - 1. ORTHORHAP A. NEMATOCERA. a. OLIGONEURA. I. CPXIDOMYIADAE. 1. LASIOPTERA Mí?. Lasioptera Mg., Syst. Besclir. I., 88 (1871).— Wtz. Monogr. in Linn. Eiit. VIH, 191 (1853). 1. Hieronymi Weyeíib., An. de Agr. de Ja Rep. Arg. 111,165(1875). Córdoba y Santa Fé (Weyenb., 1. c. et Per. Zool. III, 62. 1878). 2. CECíRO.^iYIA Mg. Cecidomyia Mg. iíi Illig. Mnguz. (1803).— Wtz., Monogr. in,Linn. Ent. VIII, 186 (1.-Í53). Observación. — WF.YENUERGH (?,í Napp. La Rep. Argeiit., 167. 1876) dice, que él conoce muchas especies argentinas de este género. Por mi parte, he observado varias de esta familia, aún no determinadas, todas de Buenos Aires (V. El Nat. Arg. I. 185. 1878). b. EUCEPHALA. 11. PSYCHODIDAE. [E. Lch. A., Informe etc. la El Nat. Arg. I, 185. 1878]. 3. P§Y€SI©»A Latr. PsYCHODA Latr., Précis des car. gen. des Ins. (1796).— Mg., Syst. Beschr. I (1818). Observ.icion,— Seis especies indígenas, según WEYENBERGH (in Napp, op. c, 167. 1876). — 112 — 111. CULICÍDAE. Ob.servaeioii.— La mayor parte de las obras que tratan de la naturaleza de estos países se ocupan mas ó menos extensamente de las especies de esta familia, pero sin determinarlas científicamente. V. GUEVARA. Hist. del Paraguay. Rio déla Plata y Tucuman. RENGGER, Reise nach Paraguay, BURMEISTER, Reíse durch die La Plata-Staaten, etc. 4. Cri.KX L. CuLEX L., Fauna Suec. (1761)., -Wied., Dipt. exot., 6 (l'-^21). — It. Desv., Essai sur la tribu des Ciilic. iii Mém. Soc. d' H. Nat. de Paris III (1827).— Guér., Genera, entr. 2, n. 9, pi. 2 (1835). * 2. diserueians Wlk., Dipt. Saund., 430 (1856). Sud América (Wlk.), Buenos Ayres (Baradero, Zarate y Las Conchas). ^- 3. flavipes Mcq.. Dipt, exot. I, 1, 35, 5 (183^).— Blanch. íii Gay. Fauna Cliil. VII, 332, 1, lauí. 1, f. 1 (1852). -Phil., Verh. z.-bot. Ges. XV, 595, 1 (1865). -E. Lcb. A., An. Sd. Cient. Arb^ X, Bol. 6, 1 (1880). C. serutiiuts Phil., 1. c, 4 (1865). Chile, Concepción (Mc(].), pruu. meríd. (Blanch.), Santiarjoy Valdivia (Phil.); Buenos Ayres (E. Lch. A.). 4, molestas KoHar, I^ras. vorz. lást. Ins., 187, f. 13 (1832). —Wlk., Tr. Linn. Soc. XVII, 331,1 (1837), 7iec Wied. (1828). Brazil (Koll.); Montevideo (Wlk.). Obsex'vaoioii. — ; No sería éste otro sinónimo del anterior? * 5. mosquito R. Desv., Essai Cul., 390 (1827). - Mcq., S. á Buff. I, 35, 8 (1834).— Guér., Genera, entr. 2, n. 9, pl. 2, f. 1 (1835). C. fasciatus Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 8, 13 (1828), nec Fabr. * C. fraterli. Desv., op. c. (1827).— O. Sack., Cat. N. Am. Dipt., ed. 2% 19(1878). — 113 — Indiüs Occid. (Wicd., R. Desv.), Cuba (R. Desv.. Mcq., Guér.) ('); Buenos Ayres. OlDservaoion. — OSTEN SACKEN divide esta especie en dos. á saber: C. fascia- tus F. — Wied. (' C. miisquito R. Desv. — Mcq. — Guér.; y C. frater R.Desv.: advierte, además, que ROHINKAU-DESVÍ^IDY (cuyo trabajo no conozco sino por el extracto publicado en el Isis de OKEN) ha separado el C./asciatus Wied. de la especie homó- nima de FAIÍRR'IUS, cambiándole el nombre en C. frat,'r\ por mi parte, pienso de esta misma manera, en atención á varias diferencias importantes que presentan las respectivas descripciones entre sí, pero no veo suficientes razones para considerar como específicamente distintos el C, mosqTíitfl R. Desv. del C. fasciatus Wied. (non F.) y, por consiguiente, del C. frater R. Desv. ■■ 6. taeniorhynehus Wied., Dipt. exot., 43, 1 (1821); Auss. zweifl. Ins. I. 8, 14 (1828).- Wlk. List of Dipt. I, 3(1848).— Scliin., Nov. Reise, 31, 4 (1868). -O. Sack., Cat. N. Am. Dipt., ed. 2? 18 (1878). C. daninosus S;iy, Journ. Acad. Pliilad. III, 11, 3 (1823); Compl. Wr., ed. Lee, II, 40 (1859). C. solí icil a lis Wlk., Dipt. Saund., 427 (1856) [Cmnp. con i'l ej. ílp. O. Sack.]. Méjico (Wied.), Pensilvania (Say, Wied.); Flo- rida y Honduras (Wlk.); Estados-Unidos (Wlk.), cstik/os del Atlántico (O. Sack.); Am. Merid. (Schin.), Buenos Ayres (Buenos Ayres, LasCou- chns y Harridero}. * 7. vittatus Phil., Verh. z.-l)ot. Ges. XV, 596, 6 (1865), nec Big. Chile, Santiago (Phil.); Buenos Ayres (orillas del lito Lujan I. Obsei-vaeioiies.— Refiriéndose á las pampas de Santa-Fé, el Dr. BURMEISTER (Reise etc. I, 131 — 1:^2) se expresa en los siguientes términos: "HálK-iseen los campos, en muchos sitios, dípteros chupadores de sangre, ya espe- cies de Oí/f.r (¡Mosquitos;, ya de Si^milia (Zancudos), La forma mas común de los primeros so acerca á nuestro C. pipiens, pero es de un color pardinegro mas oscuro y no tan grande: la otra especie, muy grande y de un amarillo claro, es mayor que el C. rt?¿««/rtí!¿í y está cubierta por todas partes de un vello ralo y fino. Aquí sólosj encontraba la pequeña forma; á la mas grande, la conocí por primera vez, mas tarde, en la pampa occidental". El mismo naturalista halló í especies de Ciilex e.\\ Mendoza (op. cit. I, 318) y dice (op. cit. I, 489), que la especie principal del Paraná (F.nlre-Rios) es una pequeña, gris oscura. í}) WALKER (List of r)ipt. I, 3) señala también el C. fasciatns en Jamaica, pero, como no lo describe, no p.iedo saber si se trata del de FABRICIUS ó del de WIK- DEWANN. - 114 - El C. antumnalis Weyeiib. [iit Napp, La Rep. Arg., 167) no ha sido descrito todavía. En mi " Informe sobre una colección de Dípteros etc." (en El Nat. Arg. I. 185. 1878), he afirmado, que conozco 12 especies de Culicides. procedentes todos del partido de Las Conchas: el " 5rtí''É'//2« muy semejante al C. JR©P1I«IIA R. Desv. PsoROPHORA R. Desv., Essai Ciilic. (1827). '■ 8. eiliata (Fnl)r.) R. Desv., Essai Ciilic. 412, 1 (1827).— Wlk., List of Di[)t. T, 2 (1818). Cuiex ciliatKS Fabr., Eiit. Syst. IV, 401, 6 (171)4); Syst. Aiitl., 85, 10 (1805). Coqueb., 111. icón. insect. 121, tab. 27, f. 7 (1804). -Wied., Dipt. exot., 36 et 39 (1821); Auss. zweifl. Ins. I. 3. 5- (1828).— St. Farg. et Serv., Eiicycl. Métli. X, 658 (1825). — Mcq., S, n Buff. I, 36. 15 (1834); Dipt. exot., Suppl. 4, 11, pl. 1, f. 1 (1850).— Wlk., List of Dipt. I, 2 (1848). -O. Sack., Cat. N. Am. Dipt., ed. 2^ 18 (1878). Culex molestus Wied., Dipt. exot., 7, 4 (1821) [Wied.j. Culex conterrens VVlií., Dipt. Saund., 427 (1856) [ComjJ. con el cj. tip. O. Sack.]. Carolina (Fiíbr.); Georgia (Wied., Mcq., Wlk.); Honduras (Wlk.); Estados-Unidos (Wlk.), cst. del Atlántico (O. Sack.); Buenos Ayres, Las Conchas (E. Lch. A., El Nat. Arg. I, 185. 1878). 6. AXOPHELES Mg. Anopheles Mg., Syst. Beschr. I, 10 (1818j. « 9 albitarsis F. Lch. A., El Nat. Arg. 1, 150, 2 (1878). Buenos Ayres, Baradcro (F. Lch. A.) * lO. annulipalpis F. Lch. A., op.c. 149, 1 (1 78). Buenos Ayres, Baradcro^ ¡lio Lujan (F. Lch. A.) 7. A,ÉDES Mg. AiíDEs Mg., Syst. Beschr. I, 13 (1818). - 115 — * 11. squamipennis F. Lch. A., ElNat. Aig. 1, 151. 3 (1878). Buenos Ayres, Baradeio (F. Lch. A.). IV. CHIRONOMIDAE S. CHIROJVOITIUÜ Mg. Chironomus Mg. iii lUig. Magaz. II, 260 (1803). -V. der Wp., Dipter. Aanteek. (extr. Tijdschr. voor Ent. XVII), 21 (1874). 12. antaretieus Wlk., Tr. Limi. Soc. XVII, 332, 2 (1837); List, of Dipt. I, 11 (1848). Patagonia, Puerto Hambre (Wlk.). ^- 13. bonaérensis E. Lch. A., Exped. al Rio Negro, Zool., 88, 42, (V. Errata. 1880); Stett. ent. Zíg. XLII, 189, 1 (is^81). Ch. pni.rtiinis ej., op. cit. (p. err., nrc Mg.). Buenos Ayres, Rio Colorado y C/iccahacn (E. Lch. A.). * 14. brasiliensis Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 15, 2 (1828). Montevideo (Wied.); Buenos Ayres. 15. lateralis Wlk., Tr. Linn. Soc. XVII, 332, 3 (1837); List of Dipt. I, 15 (i:-^48). Patagonia, Puerto Hambre (Wik.). C)l>3urva,<;ioi^.— El Dr. WFA'ENBF.RGH sfe hfi ocupado de la larva de una espe- cie á la cual ha llamado Ch. fluminicola (Per. Zool. I. 57- 1874:— Stett. ent. Ztg. XXXIV, 454. 1873). pero no ha descrito el insecto perfecto: en la obra de NAPP se limita (p. 167) á citar el género. "Me consta que los Chironomus no escasean en la vecindad de los aguazales del delta" (E. Lch. A.. El Nat. Arg. I, 185). 9. ta:ríypíís Mg. Tanypus Mg. in Illig. Magaz. II, 261 (1803). * 16. pubieornis(Fal)r.)Wied.. Dipt. exot., 40 (1821). Auss. zweifl. Ins. 1, 18. 1 (1828). C/iironoiiius piibicornis Fabr., Syst. Antl., 43, 23 (1805). — Wied., Dipt. exot., 37 (1821). Ainer. Merid. (Fabr., Wied.); Buenos Ayres, Chacabuco, - llü - lO. CFRATOPOÍÍOM Mg. Ceratüpogon Mg. in lUig. Magaz. JI (1803). Wtz., Monogr. in Linn. Ent. VI, 1 (1^52). (Weyenb. in Napp. op. c, 167. 1876]. V. SIMULIDAE 11. SIIHITLIITM Latr. SiMULiuM Latr., Hist. Nat. d. Crust. et d. Ins. III (18f)-3). Atractocera Mg. in Ilig. Maga/, (l'^Oo). Observa,Gion. — BURMEISTER señala la existencia de especies de este gjnero en las pampas de Santa-Fé (Reise etc. I. I32jyen la provincia de Mendoza (op. c. I, 318J. WEYENBERGH lo menciona también (i>i Napp, op. c. 167J. VI. MYCETOPHILIDAE OTiservacion. — Muchas especies en el Paraná (Entre-RiosJ y en Mendoza, según BURMEISTER f Reise &c. I. 318 y 489. 1861). 1. MYCETOPHILINA. a. MAOROCERARIA. 12. WAt^KOCERA Mg. Macrocera Mg. in Illig. Magaz. II, 261 (180?,).— Wtz., Monogr. in Verh. z.-b. Ges. XIII, 675 (1863). Geneja Lioy, Atti Ist. Ven., ser. 3, IX, 229 (1864). 17. Thomsonii. M. fascipennis Thoms.. Eug. Resa, 448 (1868), non Staeg. (1845). Patagonia (Thoins.). Observación —Según BURMEISTER (Reise &c. I. 318. 1861). en Mendoza se encuentra también especies de este género. b. SCIOPHÍLARIA. 13. §€IOPHII.A Mg. ScioPHiLA Mg.. Syst. Beschr. I, 245 (1818). - V>'tz., Monogr. ¡n Verh. z.-b. Ges. Xíll. 707 (1863). — 117 — 18. antárctica Wlk. Tr. Linn. Soc. X\'I1. :;ol, « (18:37). Patagonia, Puerto ¡Jaínhrc (Wlk.). Observaoioii. — WEYENBERGH (Op. c 167) cita el género como observado por él en la República Argentina. C. MYCETOPHIL.\RIA. 14, LIA Mg. (Agass. ciiiend.) Le[a Mg., Syst. Btíschr. I, 253 (1818). -Wtz. Monogr. ín Verh. z.-b. Gos. XIII, 792 (1863). 19. nubilipennis Wlk.. Ti-. Linn. Soc. XVII, 331, 9 (1 '37). Patiigonia, Pi/ciíd í/timhri' (SYlk.). 15. N. GEN. LEíAE símil. Wlk., Ti'. Linii. Soc. XVU, 335, 11 (1837). 20. N. g. sp. W!k.,l.c. Patagonin, Pucrtn Hcnn'drc (Wlk.) 16. ]?IYC'ETOPlüII.A Mg. I'.Iygetophila Mg. yj; Illig. M;igaz. 11,263 (1803). -Wtz., Monogr. in Verh. z.-V). Ges. XIII, 915 (1863). [Weyenb., op. c, 167]. 2. SCIARINA t rs. SCI ARA Mg. SciARA Mg. in Uiig. Magaz. II. 263 (1803).— Wtz., Monogr., 11 (1867). MoLOBRus Latr., Noiiv. Dict. d' Iiist. Nat. (1804). - 21. atra Mcii., Dipt. exot. I, 1. 78. 2 (1838).— Bell. Saggioetc. I, 12 (J859).- O. Sack., Cat. N. Ata. Dipt., ed. 2:\ 13 (1878). in Se. praccipua Wlk., List ufDipt. I, 1U3 (1848). Brazil (Mcq.); Méjico, Méjico y Córdoba (Bell.). Buenos Ayres, (Las Conchas y Baradcro). - 118 - OT>^!el•^-;loioll. — V. BELLARDI 1. c. á cuya opinión me adhiero. La creo dis- tinta de la Se. americana Wied., con la cual ha querido unirla SCHINER (Nov. Reise, 1 1. 1858 j; la Se. cognata Wlk.. que. según este mismo autor, es probablemente sinónima de la 5(7. americana, me parece distinta de \i\ Se. praecipna Vv'lk.. por la diferencia en las nervaduras indicada por WALKF.R. El Dr. BURJMELSTER (Reise etc. I, 318. 1861) señala en Mendoza "una Sciara completamente negra": probablemente es la Se. aira. WEYENBERGH asegura (op. c, 167J haber visto varias especies. VIL BIBIONIDAE 1. B1BI(3NINA 18. BIBIO Geoffr. BiBio Geoffr., Hist. Nat. des Ins. IL 571, 3 (17(M). -Mc(i., S. áBuff. 1, 177(1R84). HiRTEA F., Ent. Syst., Suppl., 551 (1798), nec^co\\ (1763). 22. antaretieus Wlk.. Tr. Binn. Soc. XVII, 336, 14 (1837). Patagonia, Pi/olo íhi m brc (WiK.) * 23. subaequalis Rond., Dipt. aliq. etc.. 16, 38 (1 'e'-"^).— F. Bch. A., El Nat. Arg. I, 297, 2 (1878). Buenos Ayres (Hond.), Haradero (F. Lch. A.). - 24. vieinus F. Lch. A., El Nat. Aig. I. 297, 3 (1878). Buenos Ayres, Barndcro (F. Lch. A.). Ob?!<-rv'a.vioii. — El Dr. BURjNIEISTER observó en Mendoza un Biiio cuya hem- bra era completamente roja, en Entrcrios (Paraná) otra "negra, con el tórax rojo" y "una tercera especie, mas grande, totalmente negra" en Tucuman (Reise etc. I, 489). El Dr. WEYENBERGH asegura haber visto también tres especies distintas litt Napp, op. c 167) é indica el género en la provincia de Santa-Fé (Per. Zool. III, 5i. 1878). 19. DILOPHrS Mg. DiLOPHus Mg. in Ilhg. Magaz. II, 264 (1803). 25. bicolor Wied.. Dipt. exot., 34 (1821); Auss. zweill. ins. 1, 76. 3 (1828).— Mcq. IJipt. exot. I. 1, 89, 2 (J83S), Cal)o de Buena Esperanza (Wied.); Montevideo (Mcq.). Ob.st^rvaoioii.— Tengo por bastante dudosa la determinación de MACQUART. — 119 — 26. eollaris Guér., Icón, dii régne an. MI, ooo, pl. 98, f. 7 (1S43). /). thoracicus vj.. op. c, tab. aliq. exe'npl. (V. 1. c, noírt).— Wlk., List, of Dipt. 1, 118 (1848). Orillas del Plata (Guér.); Montevideo (Wik.). Olasor vacio 11. — Es muy verosímilmente igual al que sigue: lo único que se po- dría oponer á ello, es que GUÉRIN dice que la base de ¿os fémures, es decir, c¿e iodos, es roja. " 27. peetoralis Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 76, 2 (1828). " D.similis Rond.. Dipt. :iiiq. etc., 17, 39 (1868).— F. Lch. A., El Nat. Arg. I, 296, 1 (1878). Montevideo (WieJ.); lluenos Ayres (Uond.), Ba- radüvo (F. Lch. A.). 2©. PLEOA Hgg., Wied. «PLECiAHgg.» Wied.. Aiiss. zweifl. Ins. I. 72(1828). " 28. velutina Mcq., Dipt. exot.. Suppl. 1. 21, 7. pl. 2. f. 9 (1846). * «/^. funcbris (Fabr.)» E. Lch. A., EJ Nat. A. I, 185 (1878). -F. Lch. A.. El Nat. Arg. I, 298, 4 (1878), nec Fabr.— Aut. Brasil (Minas GeracsJ y Colombia (Mcq.); Bue- nos Ayres, Las Conchas (E. Lch. A.) y Baradero (F. Lch. A.). " 29. vittata Wied.. Auss. zweiñ.Ins. I, 75, 5(L^28). Brasil (Wied.); Buenos Ayres (Buenos Ayres y Las Conchas). 2. SCATOPSINA 21. SCATOPSE Geoífr. ScATOPSE Geoffr., Hist. Nat. des Ins. TI, 515 (1764).— [Wey., op. c, 167], 30. atrata Say in Long's Exped. II, app., 367(1^24); Compl. Wr., ed. I,ec.. T, 250 (1859).— Wied., - 120 — Auss. zw.Mfl. Ins. T. 71, 1 (1 >2^^).— O Sack., Cat. N. Am. Dipt., ed. 2?, 16 (1878)? -F. Lch. A., El Nat. Arg. I. 21)9, 7 (1878), Se. recurva r.oew. Liiin. Eut. I. --SaO. Lab. •% f. 4(1846); fiillini. Journ.. n. ser., XXXVII, 317. Pensilvaiiia (Say, Wied.); Europa (Loew); Bue- nos Ayros. Baniílnn (F Lch. A.). ^- 31. carbonaria IMiil., Vcrh. z.-b. Ges. XV, 640, 4 (1865). " í(Sc. fitlrilffrsis Mc.q.» F. Lch. A., El Nat. Arg. I, 299 6 (1878). ncc Moq. Chile, Corroí y /.SVn///V/.7o'?(iMiil.); Buenos x\yres, fíaradero (F. Bch. A.). 32. pallidipes F. Lch. A., Fl Nat. Arg. I. 298, 5 (1878). Buenos Ayres, Bdraiiero (F. Lch. A.). c. POLYNEURA Vllf. TÍPULIDAE Observa.oion . — "La familia de las Típulas es abundante" en la provincia de Santa-Fé. según el Dr. WEVENBERGH (-Pcriód. Zool. III. 6i. 1878J. L iJMXOBIINA a. LIMNOBIARIA 22. €}EKA]\'Oi?l¥IA Hai. ÓERANOMYíAHaL, Eut. Magaz. I, 154 (18:3:)).— O. Sack., Monogr. N. Aiu. Dipt. IV, 78 (1869). Aporo.sa Mcq. in Webb et Berth., H. Nat. des Cañar. II (1835); Dipt. exot. I, 1, 62 (i838). Plettusa Phil., Verh. z.-b. Ges. XV. 597 (1865). [VVeyenb. ¡n Napp, op. c, 167j. •• 33. canadensis (V^'estw.) O. Sack., Monogr. N. Ani. Dipt. IV, 80. 3 (1869); Cat. N. Am. Dipt., ed 2?, 25 (1878). — 121 — Lininohinrhijnchus canadensis Westw. Loiid. and Edinb. Pililos. Magaz., ser. 3, VI (1835); Aun. Soc. Ent. Fr., ser. 1, IV, 083 (1835); Isis II (18iS). Gtíraiinim/id coiniiiiinis O. Sack., Proc. Acad. Nat. Se. Philad., 207 (1859). Canadá (West w.); Estados-Unidos, desde el Ca- nadá /iusta Fin ¡■¡da ¡j a fui en. Cedí fui' nía {O. Sack); Buenos Ayres. 23. LI]7I AGOBIA Mg. LiMNOBiA Mg.. Syst. Beschr. I (1818).— O. Sack., Monogr. N. Am. Dipt. V, 84 (18G9). Obí^ervaoion. — Hay " víirias Li?u>ia6iaí'" en la República Argentina, según el Dr. WEYENBERGH ¡in Napp. op. c. 167). Por lo que á la Litniíobia reciproca Wlk. se refiere, véase, mas adelante, la Erioptera hirsutifies íMcq.). b. ERIOPTERARIA 24. 15KIOPTEKA Mg. Erioptera Mg. in lllig. Magaz. II (1803).— O. Sack., Monogr. N. Ani. Dipt. IV, 146 (1869). [Weyenb. in Napp, op. c, 167]. Subgen. Mesoeyphona O. Sack. Mesocyphona, O. Sack., op. c, J52 (1869). * 34. hirsutipes (Mcq.). Limnobia hirsutipes Mci]. in Webb et Beilh., H. Nat. des Cañar. (1835); Dipt. exot. I, 1. 69, 1 (1838). * Limnobia reciproca Wlk. List of Dipt. I, 50 (1848). * ^ Limnobia obscurata Blanch. in Gay, Fauna Chil. VII, 343, 7 (1852). Ilisia /drsi!tl¡)cs Ptond., Dipt. exot., 91 (1863). * .^ Lininophda trichopas Phil., Verh. z.-b. Gos. XV, 610, 4 (1865). Canarias (Mci¡.); Montevideo (Wlk.); Chile (Rond.), niapel (Blanch.) y Santiayo (Phil.); Buenos Ayres (PvOnd. in lili.). - l'¿2 — Observación. — Un ejemplar de esta Erioptera fué determinado por RONDANI mismo, para la colección del Dr. BERG, como Ilisia ¡lirsittlpes: la descripción de MACyUART, aunque imperfecta, le conviene bien; la de la L. reciproca Wlk. se le adapta también sin dificultad; en cuanto á la L. obscurata Blanch. y á la L. tricho'pus Phii., me parecen muy probablemente idénticas entre si, á pesar de la diferencia de longittid. la cual está lejos de ser tan considerable como dice PHILIPPI (" fast doppelt so gross"j. pues en !a primera es de 2;í) lin. y en la segunda sólo de 3 ',li lin., no obstante el color de las patas (" testáceas" Blanch., " griseo-fuscis" Phil., " fauves" Mcq., " duU tawny" Wlk.), y aún á despecho del número de celdillas posteriores de las alas, que depende simplemente de la manera cómo el natur¿ilista citado interpreta á veces la inervación de los Tipulides (V.. por ej., O. Sack., Monogr. N. Am. Dipt. IV. 334, nota 3); admitida esta identidad, creo que se las podrá considerar sinónimas de la Erioptera liirsHtipes íMcq.j, con tanta mayor razón cuanto que ésta se encuentra también en Chile, según RONDANI, quien se sirvió de un ejemplar que le envió PHILIPPI. La presento especie pertenece, sin duda alguna, al subgénero Mesocypliona O. Sack.; como el tipo del género //ziíVr Rond.fProdr. Dipt. Ital. I, 1S2. 1856; Dipt. exot., 91. 1863) es la Erioptera maculata Mg., que, según ÜSTEN SACKEN (Cat. N. Am. Dipt.. ed. Q», 220, nota 30. 1878;, "es una verdadera Acyphoiia", la E. hirsutipes no corresponde por consiguiente á aquel, á menos de reunir los dos grupos de OSTEN SACKEN (Acy- phona y Mesocypliona) exi uno solo, bajo la denominación propuesta por RONDANI, partido que ninguna razón seria me parece aconsejar. 25. CíOMIO]»l¥IA Meg., Mg. «GoNioMYíA Meg.» Mg.. tíyst. Beschr. 1 (1818).— O. Sack., Mouogr. N. Am. Dipt. IV, 17G (1860). 35. ? antárctica Wlk., Tr. Liiin., Soc. XVII, 33-3, 4 (1887). Patagoniii, Puerto Hambre (Wlk.). C. LIMNOPHILARIA 26. EPIFMK AGINIA O. Sack. Epiphragma o. Sack., Proc. Acad. Nat. Se. Philad., 238 (1859); Monogr. N. Am. Dipt. IV, 193 (1869). ^ 36. solatrix O. Sack., Monogr. N. Am. Dipt. IV, 195, 2, pl. 2, í". 8 (1869); Cat. N. Am. Dipt., 31 (1878). LimiiophUa (Epiphragma) solatrix O. Sack., Proc. Ac. Nat. Se. Philad., 239 (1859). Estados-Unidos (Columbia) y ¿Brasil? (O. Sack.); Buenos Ayres, Las Conchas. 21. POECIMíSTOLA Schin. Poecilostüla Schin., Wien. ent. Monatschr. VII, 222 (1863). Polymoria (Phil., Verh. z.-b. Ges. XV, 608 (1865).— [Weyenb. in Nnpp, op. c, 167. Polijmoria]. - 123 - 28. I^OIWOPHILA Mcq. LiMNOPHiLA Mcq., S. á Biiff. I, 95 (1^34).— O. Sack., Moiiogr. N. Am. Dipt. IV, 196 (1869). [Weyenl». in Napp, op. c, 167]. 29. Cl¥.\OPLl§TI.'%. Westw. Gynoplistia Westw., Loiid. and Edinb. Pililos. Mag;iz., ser. 3, VI, 280 (1835). Anoplistes ej., Zool. Journ. (1831). Ctedonia Phil., Yerh. z.-b. Ges. XV, 602 (1865).— [Weyeiib. in Napp, op. c, 167. Ctedonia]. 2. PTYCHOPTERINA 30. PTYCIIOPTKRA Mg. Ptychoptera Mg. in lUig. Magaz. II (1803).— O. Sack., Monogr. N. Am. Dipt. IV, 309 (1869). [Weyenb. in Napp, op. c, 167J. 31. TAj^YWERITS Phil. Tanyderus Phil., Yoih. z.-b. Ges. XV, 780(1865).— [Weyenb. in Napp, op. c, 167]. 3. TIPULINA 32. TIPIFLA L. Típula L., Anim. perSuec. observ. in Act. litt. et scient, Suec. (1736). -Mg., Syst. Beschr. I (1818). ^ 37. nudicornis Mcq., Dipt. exot. 1, 1, 55, 5 (1838). Buenos Ayres (Mcq.). 38. pietipennis Wlk., Tr. Liim. Soc. XVII, 333, 7 (1837). Patcigonin, Puerto Ilaniln-e (Wlk.). Obíiei-Vfvoi(->n — BURMEISTER señala una especie en Mendoza y otra grande, con las alas manchadas, semejante á la T. marmoraía Mg., en el Paraná (Entrerios). WEYENBERGH asegura (/«Napp, op. c, 167; conocer, "poco mas ó menos, diez especies del género Ti/mla". En cuanto d mí. he indicado la existencia de tres especies en Las Conchas (Informe etc. in El Nat. Arg. I, 1S5. 1878). — 124 - 33. PACIIYRRHI^A Mcq Pachyrrhina Mcq., S. a Buíf. I, 70 et 88, pl. 1. f. 12 et 13 (18;34). * 39. punetifrons Mc(i., TJipt. exot. 1, 1, 49, 8 (1S^38). Brasil, pajic mcrid. de Campos Geracs (Mcq.); Buenos Ayres (Huenus Ayros, Deluruau y Las Conchas). B. BRACHYCERA a. CYCLOCERA IX. COENOiMYIADAE 34. CHlSiOMVZA Wied. Chiromyza Wied., Nova Dipt. genera (1820). Xenomorpha Mcq., Dipt. exot. I, 1, 193 (1838). 40. vittata Wied.. Nova Dipt. genera, 20, f. 8 (1820); Dipt. exot., 114, 1 (1821); Auss. zweifl. Ins. I, 237, 1 (1828).-Jen3en, Bull. Soc. Nat. Mosc. IV, 337(1832)— Mcii.,S. á Biiff.I, 422, 1, pl. 10, f. 10 (1834) — Guéi'., Icón, dii régne anim., Ins., 543, pl. 97, í. 7 (1843) Wlk., List, of Dipt. I, 227 (1848).— Schin., Nov. Reise, Dipt., 76, 1 (1868). Xenomorpha leptifurmis Mcq., Dipt. exot. T, 1, 193, 1, pl. 23, f. 1. (1838).— Wlk., List of Dipt. V, 66, 1 (1^54). Chíromi/za leptiforniis Burm., lieise etc. II, 171 (1861). Brasil (Wied., Mcq., Guér., Blandí., Wlk.), Rio Janeiro (Mcq., Wlk.); Tiicuman (Burm.); Coionibia (Schin.). — 125 — X. STRATIOTOMYIADAE Observación— WEYENBERGH (Per. Zool. I, 264. 1874) asegura que esta fami- lia está representada por numerosas especies, muchas de ellas nuevas, en la República Argentina. 1. BERIDINA 35. HADRE§TIA Thoms. Hadrestia Thoms., Eug. Resa, Dipt., 453 (1P68). 41. aenea Thoms., op. c, 454, tab. IX, f. 3 (1868). Patagonia (Thoms.). 2. SARGINA 36. PTECTICUS Loew. Ptecticus Loew, Verh. z.-b. Ges. V, 142 (1855). * 42. testaeeus (Fabr.) Loew, 1. c. (1855).— Schm., Nov. Reise, 64, 36 (186S).— O. Sack., Cat. N. Am. Dipt., ed. 2^ 45 (1878). Sargus testaeeus Fabr., Syst. AntL, 257, 6 (1805). — Wied., Auss. zweifl. Ins. II, 35, 15 (1830).— Mcq., Dipt. exot. I, 1, 203, 5 (1838) et SuppL 1, 57 (1846). — Roiid., Ditt. Brasi). in Bandi et Tmqui, Studi Entom. I, 103, 75 (1848).— Wik., List of Dipt. III, 517 (1849) et V, 91 et 94, 29 (1854).— BelL, Saggio, etc. 1, 45 (1859). Amer. Meñd. (Fabr.); Brasil (Wied., Mcq., Rond., Wlk., Schin.); Guayanas (Mcq.); Yuca- tan, Mcrida (Mcq.); Méjico, Méjico y Tampico (BelL); Buenos AjTes, Las Conchas. Observación. — Es la especie á que me he referido en mi Inf orine etc. (El Nat. Arg. I, i86j. Los ejemplares de Nueva York de que habla OBTEN SACKEN (1. c.) deben pertene- cer á otra; todos los míos tienen los tarsos posteriores como los describe RONDANI. 3. HERMETIINA 3S. HEKIIETIA Latr. Hermetia Latr., H. N. d. Crust. et d. Ins. XIV, 338 (1804). Bul. Acad. IV. 9 — 126 — * 43. illucens (L.) Latr. in Deterv., Dict. d' Hist. Nat. XXIV, J94, 54 (1804); H. Nat. des Cmst. et des Ins. XIV, 338 (1804); Gen. Cmst. et Ins. IV, 271 (1809).— Fabr., Syst. Antl., 62, 1 (1805). — Wied., Auss. zweifl. Ins. II, 22, 1, pl. 7, f. 3 (1830). -Mcq., S. á Buff. I, 228, 1, pl. 5, f. 11 et 12 (1834); Dipt. exot. I, 1, 177, 1, pl. 21, f. 2 (1838).— Perch., Genera, N». 10, pl. 4 (1835- 1838).— Wlk., List of Dipt. V, 20, 2 (1854).- Big. in La Sagra, Hist. d. Cuba, 799 (1856).— Bell., Saggio, etc.. I, 26 (1859).— Schin., Nov. Ileise, 70, 48 (1868).— Weyenb., Periód. Zool., I, 263 (1874).— O. Sack., Cat. N. Am. Dipt., ed. 2^, 46 (1878). Musca illucens L., Syst. Nat., ed. 12, II, 979, 2 (1767). Musca leucopa L„ op. c, 983, 23 (1767). Nemotehis illucens De G., Mém. Ins. VI, 205, 3, pl. 29, f. 8 (1776). Bibio illucens Fahr., Mantissa II, 328,2(1787). Syrphus leucopus Fabr., op. c. I, 338, 41 (1787). Midas illucens Fabr., Ent. Syst. IV, 253, 2 (1794). Xyluphagus illuceiis Lmk., H. Nat. des an. sans vert. III, 355, 2 (1816). Hermetia leucopa'Blanch., H. Nat. des an. artic. IV, 592 (1840). América (L.); Sud América (L.) Indias Occid. (Fabr.) ; Brasil (Wied., Mcq., Perch., Blanch., Schin.), Para, Ega y Tapa ¡jos (Wlk.); Guayana Inglesa (Erichs. in Scliomb., Reise etc.); Cuba (Big.); Méjico (Bell.); Rep. Argentina (Weyenb.), Mendoza y Paraná (Burm., Reise etc.); Colom- bia (chin.); Est. -Unidos, iSueva-York (O. Sack.). * 44. rufiventris Fabr., Syst. Antl., 63, 2 (1805).— Wied., Auss. zweifl. Ins. II, 23, 2 (1830). —Per- — 127 — ty, Delect. an. art. Bras., 183, tab. 36, f. 12 (1830-1834).— Rond., Ditt. Bras. m Bandi et Triiqui, Studi Entom. I, 101, 70 (1848).— Wlk., List. ofDipt. V, 21, 4 (1854). Sud América (Fabr., Wied., VVlk.); Brasil (Rond.); Prov. de Bahía (Perty); Buenos Ayres, Las Con- chas (E. Lch. A., El Nat. Arg. I. 186). 4. STRATIOTOMYINA Obsfirv-acion.— En mi " Informe etc. " (El Nat. Arg. I, i88), he declarado conocer 4 Estratíotominos porteños. 38. ODOXTOifIYIA Mg. Odontomyia Mg., Kiassifie. und Beschr. etc. I, 128 (1804). 45. bucephala (Gerst.). Stratiomys bucep/iala Gerst., Linn. Eut. XI, 326, 3 (1857). Montevideo (Gerst.). 46. fenes trata Thoms., Eug. Resa Dipt., 455 (1868). Buenos Ayres (Thoms.). * 47. inermis (Wied.) Mcq., Dipt. exot. I, 1, 182 (1838).— Wlk., List ofDipt. V, 48, 84 (1854). Stratiomys inermis Wied., Auss. zweifl. Ins. 11, 71, 18 (1830).- Gerst., Linn. Ent. XI, 320 et 330, 7 (1857). Montevideo y Brasil, Casapava (Wied., Wlk.); La Plata (Gerst.) Buenos Ayres, Las Conchas (E. Lch. A., El Nat. Arg. I, 186) y Baradero. * 48. pulehra Mcq., Dipt. exot. 1, 1, 186, 7 (1838).— Schin., Nov. Reise, Dipt., 57, 17 (1868). Stratiomys pulehra Wied., Analecta entom., 28, 32 (1824); Auss. zweifl. Ins. H, 65, 6, pl. 8, f. 5 (1830). -Wlk., List OfDipt. V, 46, 76 (1854).— Gerst. Linn. Ent. XI, 320 et 324, 1 (1857). Brasil (Wied.), S. Joao del Rey (Gerst.); Amé- . — 128 — rica Meridional (Mcq., Schin.); Venezuela (Burni., Reise etc.); Rep. Argentina (Weyenb. in Napp, op. c, 168), Mendoza (Burm., I. c), Buenos Ay- res (Baradero). 39. STRATIOTOMYIA Geoffr. (euiend.) Stratiomys Geoffr., Hist. Nat. des Ins. II, 475 (1764). * 49. mutabilis Fabr., Ent. Syst IV, 266, ÍS (1794); Syst. Antl., 81, 14 (1805).— Wied., Auss. zweifl. Ins. II, 63, 4, pl. 8, f. 6 (1830).~Perty, Delect. an. art. Bras., 184, tub. 36, f. 14 (1830-1834).— Wllv., List of Dipt. V, 42,61(1854). -Gerst., Linn., Ent. XI, 321 (1857).— Bell., Saggio, etc., I, 30, 1 (1859). -Schin., Nov. Reise, Dipt., 61, 25 (1868). -O. Sack., Cat. N. Ani. Dipt.. 49 (1878). Stratiomys fasciata Fabr., Ent. Syst. IV, 266, 14 (1794); Syst. Antl., 81, 15(1805). * Acrochaeta Aleus Wlk., List of Dipt. III, 526 (1849). * Straiíonnjs Aleus Wlk., op. c. V, 41, 58 (1854). * Stratiomys subalba Wlk., op. c. V, 41 et 43, 62 (1854). * Stratiomys sericeiventris Rond., Ditt. Bras. in Bandi et Truqui, Studi Entom. I, 102, 73 (1848). Cayena (Fabr., Wied.); Brasil (Wied., Wlk., Rond.), p. ccuat. (Perty), Para (Wlk.), p. merid. (Gerst.); Méjico (Gerst.), Méjico, Cuantía, Mez- tillan y Cuernauaca (Bell.); Mendoza (Burm., Reise etc. I, 317); Buenos Ayres, Las Conchas. Observación.— El Dr. BURMEISTER indica (Reise etc. I. 489) la existencia de una especie mas pequeña que la O.pidchra, en los alrededores de la ciudad del Paraná (Entrerios). WEYENBERGH (Per. Zool. III, 61) señala el género Stratiotomyia en la Provincia de Santa-Fé. — 129 — 40. CYPIIOMYIA Wied. Cyphomyia Wied., Zool. Mngaz. I, 3, 55 (1819).— Gerst., Linn. Ent. XI, 263 (1857). 50. auriflamma Hgg., Wied. Zool. Magaz. I, 3, 54, 21 (1819); Analecta Entom., 13, f. 4 (1824); Auss. zweifl. Ins. II, 54, 1, pl. 8, f. 1 (183Ü).— Mcq., S. a Buff. I, 242, 2 (1834).-Blanch., H. Nat. des an. artic. IV, 593 (184Ü); in Cuv., Rég. an., ed. Masson, Ins.. pl. 172 bis, f. 5 (1849). — Guér., Tcon. du régne an., Ins., 544, pl. 98, f. 5 (1843). -Wlk., List of Dipt. V, 18, 11 (1854).— Gerst., Linn. Ent. XI, 276, 2, pl. 3, f. 12 (1857). —Bell., Saggio, etc., I, 21, 1 (1859).— Big., Ann. Soc. Ent. Fr., ser. 5% V, 484 (1875).- O. Sack., Cat. N. Am. Dipt., 49 (1878). Cyph'iimjia chrysodota Perty, Del. an. art. Bras., 184, tab. 36, f. 14 (1830-1834).- Wlk., op. c, V, 18, . 12 (1854). -Big., Le. (1875). Cyphomyia cyanca Mcq., S. ;\ Buff. I, 242, 1, pl. 6, f. 3 (C. coerulea 1P34), ncc Wied. [Gerst.]. Brasil (Wied., Mcq., Blanch., Guér., Big.), Prov. de Minas (Pevty), Para y p. mcrtd. (Gerst.); Ca- yena (Mcq.); Montevideo (Wlk.); Méjico (Bell.). * 51. Wiedemanni Gerst., Linn. Ent. XI, 302, 19 (lP57).-Schin., Nov. Reise. Dipt., 53,5 (1868).— Big. Ann. Soc. Ent. Fr., ser. 5^ , V, 486 (1875). CypliMiu/ia albitarsis Wied. Analecta, Entom., 13 (1824); Auss. zweifl. Ins. II, 56, 5, pl. 8, f. 2 (1830). -.<- Mcq., Dipt. exot. I, 1, 175, 2 (1838).- Wlk., List of Dipt. V, 16, 4 (1854), nec (Fabr.) Gerst. Cyphomyia fiavispinis Mcq.. Dipt. exOt., Suppl. 5, 60, 6(1855). Brasil (Wied., Mcq., Gerst.), Para (Wlk., Gerst., — 130 — Big.); ■Jnerid. (Gerst.); Amér. Merid. (Mc(]., Schin.); Cayena, Surinam y Venezuela (Gerst.) Misio'ies. 41. XEIflATOTELlTS Geoíñ'. (emmeiid.) Nemotelus Geoffr., Hist. Nat. des Ins. II, 542 (1764). * 52. faseiatifrons, E. Lch. A., Exped. al Rio Negro, ZooL, 89, 43, (1880); Stett. Ent. Zg. XLII, 190, 2 (1881). Buenos Ayres, Pampas del Sur (E. Lch. A.). XI. TABANIDAE. 1. PANGONIINA. 42. PA:MGO«íI4 Latr. (s. lat.). Pangonia Latr., Hist.. Nat. des Crust. et des Ins. III, 437 (1802).— Mcq., Dipt. exot. I, 1, 90 bis et 93 S3. australis Phil., Verh. z. -b. Ges. XV, 710, 16 (1865). Patagonia, «entre los layas Clanquihue y Na- huelliuapi» (Phil.). Subg. Fidena, Walk. Pangonia, subg. Fidena Wlk., Dipt. Saund., 8 (1850). * Sackenimyia pt. Big., Ann. Soc. Ent. Fr., ser. 5^, IX, Bull., 50 (1879) et ser. 5^ , X, 374 (1880). 34. sorbens V^^'ied., Auss. zweifl. Ins. I, 93, 13 (1828).— Wlk., List of Dipt. I, 133 (1848) et V, 123 et 12", 51 et Add., 323 (1854). Pangonia (Fidena) sorbens Wlk., Dipt. Saund., 8 (1850). Montevideo (Wied., Wlk.); Brasil, Santarem (Wlk.). Observación. — BURMEISTER señala "dos especies de Pangonia, de tamaño mediocre", en la Provincia de Tucuman. y añade que no ha observado este género en las comarcas situadas más hacia al Sur (Reise etc. 11, 170). — 181 — 43. E§E]\^BECKIA Rond. EsENBECKiA Rond.. Dipt. exot., 8o (J863). 55. pangonina Rond., 1. c. (1863). Silviiis Esenhcckii Wied., Aiiss. zweifl. Ins. II, 623, 19 (1830).— Wlk., List of Dipt. V, 274, 4 (1854). Brasil (Wied., Wlk.); Rep. Argentina, Catamar- ca y región de (as Cordilleras (Burm., Reiseetc, n, 170). 44. SILVirS Mg. SiLvius Mg., Syst. Bescíir. III, 27 (1820). 56. rufipes Mcq., Dipt. exot., Siippl. 4, 87, 1 (1850). Corrientes (Mcq.). 45. SCEP§IS Wlk. ScEPSis Wlk., Dipt. Saiind., 71 (1850). * 57. nivalis Wlk., 1. c, pl. 2, f. 7 (1850); List of Dipt. Y, 276, 1 (1854). Sud América (Wlk.); Montevideo. 2. TABANINA Observación.— "Los Tabaninos (Tabaninae) son comunes en Las Conchas; yo he distinguido 6 especies" (E. Lch. A., El Nat. Arg. I, 185). 46. HADRIJS Perty. Hadrus Perty, Del. an. art. Bras., 182(1830-1834). Lepiselaga Mcq.. Dipt. exot. 1, 1, 90 his et 153 (1838). " 58. albitarsis Mcq. Lepiselaga albitarsis Mcq., Dipt. exot., Suppl. 4, 36, 1 (1850). Buenos Ayres (Mcq.). Observación. — Esta especie es el Diabasis á que me he referido en mi " Informe sobre una colección de Dípteros reunida en Las Canchas por D. MANUEL OLIVEIRA CÉSAR" (El Nat. Arg. I. i88). * 59. erassipes (Fabr.) [v. Loew, Berl. ent Zeitschr. XIII, 6. 1869]. — 132 — Haematopota crassipes Fabr., Syst. Antl., IOS, 4 (1805) — Wied., Dipt. exot., 97, 2 (1821); Auss. zweifl. íns. I, 220, 10 (1828). Tabanus lepidotus Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 193, 123 (1828). Hadrus lepidotus Perty, Del. an, art. Bras., 183, tab. 36, f. 9 (1830-1834).— Wlk., List of Dipt. I, 209 (1848) et V, 272, 1 (1854).— Bell., Saggio, etc., I, 75, 1 (1859, G-Kcl. (y =Lepidoselaga recta Loew, 1. c. 1869).— Schin., Nov. Keise, Dipt., 96, 39 (1868). Lepiselaga lepidota Mcq., Dipt. exot. I, 1, 154, 1, pl, 18, f. 3 (1838).— O. Sack., Prod. Monogr. Tab. U. St. II, 475 {Lepidoselaega, 1876); Cat. N. Am. Dipt., ed. 2^, 55 (Lepidoselaga, 1878). Brasil (Wied., Mcq., Wlk.), Prov. d. Bahia (Perty), Pao'á (Wlk.); GLiayana(Mcq.,Erichs. w Schomb. Pteise etc.); Méjico (Bell.); Sud América (S(;hin.); Cuba (Loew); Misiones. 41. ACAA'THOCERA Mcq. AcANTHOCERA Mcq., S. á Buíf. I, 209 (1834). — Loew, Dipterenf. Südafr., 31 (1860). 60. exstinta (Wied.) Loew, 1. c. (1860). Haematopota exstinta Wied., Auss. zweiñ. Ins. I, 214, 2 (1828).- Wlk., List of Dipt. V, 295, 4 (1854). Acanthocera marginalis Wlk., op. c. V, 268, 2 (1854) [Loew]. Montevideo (Wied.); Brasil, Para (Wlk.). 48. DICHEL ACERA Mcq. DicHELACERA Mcq., Dipt. exot. I, 1, 112 (1838). 61. flava (Wied.) Wlk., List of Dipt. V, 153, 25 (1854). — 183 — Tabanus flavus Wied., Auss. zweifl. Ins. 1, 163, 80 (182S). Montevideo (Wied., Wlk.). 62. nubipennis Rond., Dipt. aliq. in Am. Mer. lecta á Prof. P. Strobel, 16, 37 (1868). Mendoza. Rio Piceuta (Rond.). * 63. unifaseiata Mcq., Dipt. exot. 1, 1, 115, 3 (1838). Brasil (Mcq.); Buenos Ayres, Chacabuco. Observación.— El Dr.BURMEISTER cita (Reise etc. II, 170) una especie de la provincia de Tucuman, próxima al Taianjts Jamiarii Wied. (Dichelacera Januarii Wlk.;. 49. DIA€lII^ORll§ O. Sack. DiACHLORus O. Sack., Prodr. Monogr. Tab. U. St. II, 475 (1876). DiABAsis Mcq., S. a Buff. I, 207 (1834), neo Hgg. (1819). 64. oehraeeus Mcq. Zíiír&osisoc/iJTícea Mcq., Dipt. exot., suppi. 4, 36, 4 (1850). Corrientes (Mcq.). 50, §TIBA§0]!IA Schin. Stibasoma Schin., Nov. Reise, 93 (1868). 65. theotaenia (Wied.) Schin., op. c, 94,34, pl. 2, f. 6 (1868). Tabanus theotaenia Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 136, 38 (1828).- Wlk., List of Dipt. V, 193 et 200, 194 (1854). Montevideo (Wied.). 51. TABAl^rS L. Tabanus L., Fauna Suec. (1761). 66. albipalpis (Agelaniíis) RonA., Di^tt. aliquR etc., 13, 33 (1868). Santa Fé y Córdoba (Rond.). 67. albohirtus Wlk., Tr. Linn. Soc. XVIl, 338, 18 (1837). — 134 — "Cape Gregory" (Wlk. Patagonia, Punta de San Gregorio?) * 68. angustusMcq.,Dipt.exot. 1,1, 136,29, pl. 17, f. 3 (1838). -Wlk. List of Dipt. V, 194 et 208, 226 (1854). Montevkleo (Mcq., Wlk.); Buenos Ayres, Chaca- bu co. * 69. bonariensis Mcq., Dipt., exot. I, 1, 138, 83 (1838).— Wlk., List of Dipt. V, 194 et 209, 230 (1854). AyeloAiius acupunc.tatus líond., Dipt. aliqua etc., 15, 36 (1868). Buenos Ayres (Mcq., Wlk.); Patagonia (Rond.). 70. dorsiger Wied., Dipt. exot., 83, 38 (1821); Auss. zweifl. Ins. I, 172, 92 (1828).— Wlk., List of Dipt. I, 180 (1848) et V, 193 et202, 202 (1854). Brasil (Wied., Wlk.), Montevideo (Wlk.). 71. duplovittatus (Ágelanius) Rond., op. c, 14, 34 (1868). Buenos Ayres, Bahía Blanca (Rond.). 72. Hilarii Mcq.. Dipt. exot. I. 2, SuppL, 185 (1838). —Wlk., List of Dipt. Y. 194 et 210, 236 (1854). ''Desde la desembocadura del Uruguay hasta Mi.siones" (Mcq.). 73. impressus Wied., Auss. zweifl. Ins. I, i26. 23 (1828).— Wlk.. List of Dipt. I, 146 (1848) et V, 194 et 205. 215 (1854). Montevideo (Wied.); Demorara y Brasil (Wlk.). 74. interpositus (Ágelanius) Rond., Dipt. aliqua etc., 15, 35 (1868). Mendoza, Cruz de Caña (Rond.). * 75. lineóla Fabr. Ent. Syst. V, 369, 33 (1794); Syst., Antl., 102, 41 (1805).— Coqueb., 111. Icen., 112, — 135 — tab. 25, f. 6 (1804). -Wied., Dípt. exot., 81, 36 (1821); Anss. zweifl. Ins. I, 170, 89 (1838).— ?Mcq., üiptexot. 1, 1, 146, 49 (1838). -Wlk., List oí" Dipt. I, 18-2 (1848) et V, 175 ot 184, 123 (1854). — HaiTis, Ins. N. Engi. ed. 1^ 406 (1841) et ed. 3% 602, f.262 (1862). -O. Sack., Prodr. Monoor. Tab. U. St. II, 428 et 448, 23 (1876); Cat. N. Am. Dipt. 58(1878). Tabanus simulan s Wlk., List, of Dipt. I, 182 (1848) ; etV, 173,78(1854). [O. Sack.J. ? Tabanus scutellaris Wlk., Dipt. Saiind., 27 (1^'50). List of Dipt. V, 174, 85 (1854) [O. Sack.]. Araer. Septentr. (Fabr., Wied., Wlk.), Florida (Wlk.), Nueva Escocia (Wlk.), BoUon (Wlk.), EstadosUnidos en la costa del Alian fico, Florida, Tejas, loiua &c. y Méjico (O. Sack.); Rueños .Vyres. 76. magellanieus Phil., An.d.laUniv.d. Chile, XXI, 413 (1862), Yerh. z.-b. Ges. XV, 717, 19 (1865). Patagonia, estrecho de Magallanes (Phil.). 77. mi ñor Mcq., Dipt. exot., Suppl. 4, 33, 106 (1850). Patagonia (Mcq.). 78. missionum Mcq., Dipt. exot., I, 2, Suppl., 1^6 (1838).— Wlk., List, of Dipt. V, 194 et 207, 222 (1854). Misiones (Mcq.). 79. monoehroma Wied., Auss. zweiü. Ins. I, 555 27(1828).— Wlk., List of Dipt. V, 193 et 203, 207 (1854). Montevideo (Wied., Wlk.). 80. nigrifrons Phil., Yerh. z.-b. Ges. XX, 720, 29 (1865). «Entre los lagos Todos los Santos y ^ahuclhiía- pi» (Phil.). - 136 - 81. psolopterus Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 181, 105 (1828).— Wlk., List, of Dipt. Y, 194 et 205, 218 (1854). Montevideo (Wied., Wllí.). * 82. pungens Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 175, 97 (182..).— Wlk., List, of Dipt. V, 193 et 203, 205 (1854). Montevideo (Wied., Wlk.); Buenos Ayres. 83. rubeseens Mcq., Dipt. exot. I, 1, 139, 34 (1838). —Wlk., List, of Dipt. Y, 195 et 212, 246 (1854). Montevideo (Mcq., Wlk.). 84. trigonophorus Mcq., Dipt. exot. I, 2, Suppl., 185 (1838).— WJk., List of Dipt. Y, 196 et 222, 290 (1854). «Desde la desembocadura del Uruguay hasta Misiones» (Mcq.). 85. tritus Wlk., Tr. Linn. Soc. XYII, 338, 19(1837); List. ofDipt. I, 189(1848). «Cape Gregory» (Wlk. Patagonia, Punta de San Greí/ofíu^). 86. uruguayensis. Tabanus píctípennis Mcq., Dip. exot,, Suppl. 4, 32, 102, pi. 2, f. 8 (1850), nec ej., S. á Buff (1834). 87. varipes Wlk., Tr. Linn. Soc. XYII, 337, 17 (1837). Rep. O. del Uruguay, Isla Gorríti (Wlk.). Observación.— Varias grandes especies de Taia?ttts, todas inéditas, por lo me- nos hasta i86i, viven en los desfiladeros de la Cordillera, sin avanzar hacia la pampa, según el Dr.BURMEISTER(Reise etc. I. 317 & II. 170;: el mismo naturalista no halló sino una especie en Mendoza y dos en el Paratiá (Entrerios). todas muy pequeñas (op. c. I. 317 & 483). "El Sr. STELZNER" dice el Dr. WEYENBERGH (in Napp. op. c. l68j. confirmando los asertos de BURMEISTER. " nos ha traído de la Cordillera algu- nas lindas especies de Tabanidae ó tábanos." - 137 - C. ORTHOCERA XII. LEPTIDIDAE. Observación.— El Dr. WEYENBERGH indica la existencia de esta familia e« la República Argentina, diciendo que conoce pocas especies {in Napp, i68}. XIII. ASILIDAE. 1. DASYPOGONINA 52. HYPEJVETE§ Loew. Hypenetes Loew, Dipterenf. Südafr., 89 (1860). Clavator Phil., Veih. z.-b. Ges. XV, 699 (1865), nec O. Sack. (1877). Observación.— OSTEN SACKEN (Western Díptera. 291) ha restablecido el género Clavator, fundándose en una especie de California (C. sabuloiíitm O. Sack.) que presenta un garfio terminal en las tibias anteriores, carácter sobre el cual PHI- LIPPI guarda silencio y que falta en \os Hypenetes Loew; varios ejemplares del Cla- vator putictipentiis Phil., especie típica de su género, traidos de Chile por el Dr. ];ERG, me demuestran que la sinonimia establecida por GERSTACKER (Kntom. Berl. 1865, 99 et 1 13) es exacta, pues no presentan dicho garfio, y que, por consiguiente, la especie norte-americana no pertenece al género Clavator Phil., sino á otro, al parecer no des- crito antes. El Prof. VAN DER WULP (Tijdschr. etc. XII, V.rsl ,21. 1879) cita, sin describirla, una nueva especie {H. asiliformis V. d. Wp.J descubierta en la República Argentina por el Dr. WEYENBERGH. 53. ALLOPOCJOIV Scbin. Allopogon Schin., Verh. z.-b. Ges. XYI, 670 (1866). * 88. ferrugineus E. Lch. A., Asil. Arg. in An. Sd. Cient. Arg. X, 182, 43; Sep., 63, 43 (1880). Mendoza (E. Lcb. A.). 89. Heydenii (Jaenn.) E. Lch. A., op. c. X, 181, 9; Sep., 63, 9 (1880). Dasypogon Heydenii Jaenn., Neue exot. Dipt., 48, 60, pl. 2, f. 1 (1867).- E. Lch. A. op. c. IX, 29, 9; Sep.. 12, 9(1C80). Comentes (Jaenn.). •' 90. infumatus E. Lch. A., op. c. X, 183, 44 (1880) et XI, 17 (F81); Sep., 65, 44 (1880). Buenos Ayrcs, San José de flores (E. Lch. A.). — 138 — 91. tessellatus (Wied.) Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 701 (18G6).— E. Lch. A., op. c. VIII, 147,2; Sep., 3, 3 (1879). Dasypoijon tessellatus Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 390, 38 (1828). -Wlk., List, of Dipt. VI, 447, 176 (1854). Montevideo (Wied., Wlk., Schin.). * 92. vittatus (Wied.) Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 701 (1866). -E. Lch. A., op. c. VIH, 146, 1 et X, 181, 1; Sep., 63, 1 (1879). Dasypogon vittatus Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 389, 36 (182^).— Wlk., List of Dipt. VI, 446, 175 (1854). Dasypogon longiungulatus Mc(\., Dipt. ex ot. 1,2, 36, 7, pl. 3, f. 6 (1838), necey, op. c, Suppl. 4 (1850). — WJk., op. c. VI, 436, 137 (1854). Dasypogon anulitarsis Rond., Dipt. aliqua etc., 9, 24 (1868).— E. Lch. A., op. c. IX, 28, 8; Sep., 11, 8 (1880). Allopogon gracile Big., Ann. Soc. Ent. Fr., ser. 5», VIII, 418 (1878). Montevideo (Wied., Wlk., Schin.); Misiones (Mcq.); Uruguay (Big.); Buenos Ayres, Las Conchas, San Fernando, Chasco niús, Baradero (E. Lch. A.) y Chacabuco. 54. PHO]\ICO€LEPTE§ E. Lch. A. Phonicocleptes E. Lch. A., Asil. Arg. in An. Sd. Cient. Arg. XI, 18; Sep. 67 (1881). * 93. Busiris E. Lch. A., op. c. XI, 21, 45; Sep., 70, 45 (1881). Buenos Ayres, Chacabuco (E. Lch. A.). 55. BLEPlIAREPllTltl Bond. Blepharepium Rond., Ditt. Bras. in Bandi et Truqui, Studi Entom. I, 89, tab. 3 bis, f. 8 (1848).— E. Lch. A., — 139 - Sep.; Asil Arg. in An. Sd. Cient. Arg. XI, 22, 72 (1881). Senobasis pt., Mcq., Dipt. exot. I, 2, 52 (1838).— Schin. Verh. z.-b. Ges. XVI, 655 (1866). Planetolestes E. Lch. A., op. c. VIII, 147; Sep., 3 (1879). * 94. eoaretatum (Perty) E. Lch. A., op. c. XI, 24, 3; Sep., 73, 3 (1881). Laphria coarctata Perty, Delect. an. art. Bras., 181, tab. 36, f. 4 (1830-34). Dasypogon bonariensis Mcq., Dipt. exot. I, 2, Suppl. 194 (1838). -Wlk., List of Dipt. VI, 439, 144 . (1854). ? Blepharepium luridum Rond., op. c, 89, 48 (1848). Dasijpogon coarctatus Wlk., op. c. VI, Add., 504 (1854). Dasypogon subcontractus Wlk., Dipt. Saund., 455 (1856). Senobasis annulatus Big. in La Sagra, Hist. de Cuba, 789, pl. 20, f. 3 (1856). Dasypogon secabilis Wlk., Trans. Ent. Soc. ser, 2'"*, V, 276 (1860). Dasypogon (Saropogon?) secabilis Bell. Saggio, etc., II, 63, lpl.l,f. 4(1862). Senobasis secabilis Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 701 (1866). Diogmites annulatus Loew in litt. — O. Sack., Bul. Buf. Soc. Nat. Sci., 184(1874); Cat. N. Am. Dipt., 72 (1878). Planetolestes coarctatus E. Lch. A., op. c, VIII, 147, 3;Sep., 6, 3(1879). Brasil (Rond.), orillas del Rio Negro (Perty), Amazonas (Wlk,); Buenos Ayres (Mcq., Wlk.), Las Conchas, Chascomús y Baradero (E. Lch. A.); Cuba (Big.); Méjico (Wlk. y Bell.). — 140 — Observación.— El Dasipogonino con el cual VAN DER WULP (Tijdschr. etc. XXII, Versl., 21, 1879) no pudo "hacer otra cosa mejor que colocarlo en el genero Seno- ¿asis" no obstante que sus caríicteres no se le adaptasen por completo, no era, proba- blemente, sino el Bh'pharephtm coarciatum. 36. LASTAURrS Loew. Lastaurus Loew, BemerK. Fam. Asil., 11 (1851). MoRiMNA Wlk., Dipt. Saimd., 104 (1851). * 93. ardens (Wied.) Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 702 (1866).~E. Lch. A., op. c. VIII, 151, 4; Sep., 7, 4 (1879). Dasypogon ardens Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 391, 39, (1828).— Wlk., List of Dipt. VI, 441 et 446, 171 (1854). Brasil (Wied., Wlk., Schin.); Buenos Ayres (Buenos Ayres y Las Conchas) y Misiones (E. Lch. A.). 5ff. PROLEPSIS Wlk. Prolepsis Wlk., Dipt. Saund., 101 (1851). Cacodaemon Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 671 (1866). * 96. lucifer (Wied.) E. Lch. A., op. c. XI, 26, 5; Sep., 76 (ISSl). Dasypogon Lucifer Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 388, 34 9 (1828).— Wlk., List oí Dipt. VI, 431 et 432, 122. 9 (1854). Dasypogon Satanás Wied., op. c, 401, 56. (f (1828).— Loew, Bemerk. Fain. Asil.. 13. ¡y et Q (1851).— Wlk., op. c, 441 et 442, 153. q' (1854). ? Dasypogon rufipennis Mcq., Dipt. exot. I, 2, 45, 28. ^ '(1838).— Wlk., op. c, 438, 142. Q (1854).— E. Lch. A., op. c. IX, 29, 10; Sep., 12^10 (1880). Prolepsis fumifíamma Wlk., Dipt. Saund., 101, pl. 3, f. 6. 9 (1851); List of Dipt. VI, 437, 139 (1854). —Schin. op. c. XVI, 702 (1866). Cacodaemon Lucifer Schin., Verh. z.-b. Ges., 672, 678 et 702. Q (1866).— Big., Ann. Soc. Ent. Fr., ser. — 141 — 5^ VIII, 431. (^ et O (1878).— Van der Wp., Tijdscbr. voor Entom! XXII, Versl., 21 (1879). — E. Lcli. A.., op. c. VIII, 152, 5; ep., 8, 5. q^ et O (1879). Cacodaemoii Satanás Schin., op. c, 702. q"' (1866). — Van der Wp., 1. c. (1879). I\Iontevideo (Wied., Wlk., chin.); Rep. O. del Uruguay (Mcq.)?; Brasil (Wlk.); Rep. Argentina (V. der Wp.): Buenos Ayres, Buenos Aijres y Bar adero (E. Lch. A.). Observación. — VAN DER WULP (1. c.) indica otra especie argentina, la cual presenta los caracteres del género Cacodaemott, pero se distingue por el abdomen más delgado que en éste. 5§. TOL]?IEROLESTES E. Lcll. A. ToLMEROLESTEs E. Lcli. A., op. c. XI, 27; Sep., 76 (1881). * 97. fax E. Lch. A., op. c. XI, 30, 46; Sep., 80, 46 (1881). Buenos Ayres, Bar adero (E. Lch. A.). * 98. Pluto E. Lch. A., op. c. XI, 112, 47; Sep., 81, 47 (1881). Buenos Ayres, Mercedes, San José de Flores y Baradero (E. Lch. A.) * 99. rubripes E. Lch. A., op. c. XT, 114, 48; Sep., 84, 48 (1881). San Luis (E. Lch. A.). 59. CYLICOMERA E. Lch. A. Cylicomera E. Lch. A., op. c. XI, 115; Sep., 85 (1881). * 100. fraterna F. Lch. A., E. Lch. A., op. c. XI, 117, 49; Sep., 87,49 (1881). Buenos Ayres, Chacabuco (E. Lch. A.). * 101. rubrofaseiata E. Lch. A., op. c. XI, 119, 50; Sep., 89, 50 (1881). Buenos Ayres, Chascomús y Chacabuco (E. Lch. A.). Bol. Acad. IV. 10 — 142 — Observación — 'EX Pugio discolor Burm., díptero de Tucuman, "próximo á los Xiphoceriís, negro, el macho con las patas rojas, la hembra con el abdomen rojo", (Reise etc. II, 170. 1861J, tal vez pertenece al genero Cylicomera. 60. SCYLATICüS Loew. ScYLATicus Loew, Ófvers. K. Vet. Acad. Forh. XIV, 342 (1S57); Dipterenf. Südafr., 73 et 84 (1860). * 102. distinguendus F. Lch. A., E. Lch. A., op. c. XI, 121, 51 ; Sep., 91, 51 (1881). Buenos Ayres, Chacabuco (E. Lch. A.). 61. »IC11A]%"ܧ Loew. DicRANus Loew, Bemerk. Fam. Asi]., 13 (1851). Macronyx Big., Ann. Soc. Ent. Fr., ser 3f', V, 519 (1857). * 103. Tuema E. Lch. A., op. c. IX, 26, 6 (1880) et XI, 121, 6 (1881); Sep., 9 (1880) et 93, 6 (1881). Tucuman (E, Lch. A.). Observación. — La especie remitida por el Dr. WEYENBERGH al Prof. VAN DER WULP (Tijdschr. voorEntom.XVIII. Veri., i6. 1875) y que éste, en vista de los ca- racteres que lo separan del Z>. ríí/zY/w ("Wied.j Loew y del /?. longiungulatus (Mcq.) Schin., considera como nueva, denominándola, sin describirla, D. praecellens, (op. c. XXII, Versl., 11. 1879), es tal vez mi D. Tuctna. 62. ilR€HILE§TRI§ Loew. Archilestes Schm., Verh. z.-b. Ges. XVI, 672 (1866), UQc Sel.-Longch. (1362). Archilestris Loew, Berl. ent. Zeitschr. XVIII, 377 (1874), 104. eapnopterus (Wied.) Schin. L c. (1868) et XVII, 377, 45 (Archilestes. 1867).- E. Lch. A., op. c. IX, 28, 7 (1880); Sep., 11, 7 (1880) et 93 (1881). Dasypogoii eapnopterus Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 3/6, 15 (1828).— Wlk., List of Dipt. VI, 141 et 444, 163 (1854). Dasypogoii albUarsis Mcq., Dipt. exot., Suppl. 1°, 66, 46, pl. 7, f. 7 (1846).— Wlk., op. c. VI, 438 et 440, 151(1854). [Schin.]. Montevideo (Wied., Wlk., Schin.); Brasil (Wlk.), Minas Geraes (Mcq.). — 143 — 63. LAPAKITS Loew. Laparus Loew. Bemerk. Fam. Asil., 4 (1851); Dipterenf. Siidafr., 57 (1860). Observfioioii. —Entre los Asilides enviados por el Dr. WEYENBERGH. el Prof. VAN DER WULP halló 203 especies de este género (Tijdschr. voor Entom. XXII. VersI., 21. 1879). 64. DASYPOGON Mg. Dasypogon Mg., Class. Beschr. eur. zweifl. Ins. (1804).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 656 (1866). * 105. costalis E. Lch. A., op. c. IX, 29, 11 (IS^^O); Scp., 12 (1880) et 94, 11 (1881). Buenos Ayres, Bclgrano y Mercedes (E. Lch. A.). Observación.— En las pampas de Mendoza halló el Dr. BURMEISTER "un Dasypogon completamente amarillo parduzco claro" ( "blassgelbbraunen" ); en el Paraná (Entrerios) observó, en lugar de éste, "una especie algo menor, parda oscura, con una banda blanca en los bordes laterales del mesonoto." 65. PLE:§I0I?II?IA Mcq. Plesiomma Mcq., Dipt. exot. I, 2. 54 (1838). * 106. semirufa (Wied.) Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 678, et 702 (^"^66).— E. Lch. A., op. c, Sep., 94, 52 (1881). Dasijpofjon semirufus Wied., Aiiss. zweifl. Ins. I, 393, 42 (1828).— WlK., op. c, 441 et 443, 157 (1854). Brasil (Wied., Wlk., Schin.); Rep. Argentina (V. d. Wp. Tijdschr. etc. XXII, Versl., 21), O. de Buenos Ayres (E. Lch. A.). 66. IIOLCOCEPIIALA Jaenn. HoLCOCEPHALA Jacmi., Nene exot. Dipt., 51 (1867). DiscocEPHALA Mcq., Dipt. exot. I, 2, 50 (1838), nec Ehr. (Discocephalus . 1830) nec Lap. (1833). * 107. uruguayensis E. Lch. A., op. c, Sep., 95, 53 (1881). llep. O. del UiTigaay, Mercedes (E. Lch. A.). Observa-eioii.- «El Dr. BURMEISTER menciona (Reise etc. II, 170. i86i) una Holcocephala de Tucuman, "semejante á la D. abdoniinalis Say, con la mitad de las — 144 — alas teñida de negro", á la cual denomina Discocephala pullata" (E. Lch. A., op. c, Sep., 96. nota;; señala ademas (1. c), en la misma provincia, " un nuevo género, próximo á Z'/iCi5írí7t/2íT/íi Mcq., caracterizado por los fémures posteriores enormemente engrosa- dos." VAN DER WULP (Tijdschr. etc. XXII, Versl., 21. 1879) habla también de espe- cies argentinas pertenecientes al género Discocepíicila Mcq. ó al género ¿íí/Vc/zí Loew. 2. LAPHPJINA. a. ATOMOSIARIA. 67. ATOMOSIA Mcq. Atomosia Mcq., Dipt. exot. I, 2, 78(183S). CoRMANSis Wlk., Dipt. Saund., 154 (1851). * 108. Beekeri Jaenn., Neue exot. Dipt., 51, 63 (1867)?— E. Lch. A., op. c. IX, 52, 14; Sep., 19, 14 (1880). Méjico (Jaenn.); Buenos Ayres, Baradero y Las Conchas (E. Lch. A.). 109. limbiventris Thoms., Eug. Resa, Dipt., 466 (186S).— E. Lch. A., op. c. IX, 50, 12; Sep., 17, 12 {limbativentris. 1880). Montevideo (Thoms.). 110. modesta (Phil.) Scliin., Verh. z.-bot. Ges. XVI, 706 (1866).— Van der Wp., Tijdschr. voor En- tom. XXII, Versl., 21 (1879). Laphria modesta Phil., Verh. z.-bot. Ges. XV, 685, 3, cum fig. alae (1865). Chile, Santiago (Phil.); Rep. Argentina (V. der Wp.). 111. pilipes Thoms., Eug. Resa, Dipt., 465 (1868).— E. Lch. A., op. c. IX, 52, 15; Sep., 19, 15 (pilos ipes. 1880). Buenos Ayres (Thoms.). * 112. venustulaE. Lch. A., op. c. IX, 50, 13; Sep., 17, 13 (1880). Gran Chaco y Buenos Ayres, Las Conchas (E. Lch. A.). — 145 — 68. TERATOTAE^IA Schiii. (emend.) Cerotainia Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 662 et 673 (1866). Ceratotaenia E. Lch. A., op. c. IX, 52; Sep., 19 (18^0). * 113. violaeeithorax E. Lch. A., 1. c, 16 (1880). Buenos Ayres, Buenos Ayres (E. Lch. A.). b. DASYTHUICARIA. 69. DA§YTBB]I&i:3[ Loew. Dasythrix Loew., Beinerk. Fam. Asil., 21 (1851). * 114. leucophaea E. Lch. A., op. c. IX, 55, 17; Sep., 22, 17 (1880). Buenos Ayres, Buenos Ayres (E. Lch. A.) y Chacabuco. 70. A§ICYA E. Lch. A. AsiCYA E. Lch. A., op. c. IX, 224; Sep., 24 (1880). * 115. faseiata E. Lch. A., op. c. IX, 227, 18; Sep., 27, IR (18^0). Buenos Ayres, Bar adero (E. Lch. A.). C. LYCOMYIARIA. fl. LYCOMYIA Big. Lycomya Big., Aun. Soc. Ent. F., ser. 3, V, 288 (1857). Observación.— El Sr. VAI-i DER WULP (Tijdschr. voor Eutom. XXU. Versl., 21. 1879) recibió del Dr. WEYENBERGH un Lafrino de la República Argentina que le pareció pertenecer á este género, representado hasta ahora por una sola especie (L. Germaini Big.). oriunda de Chile. "El Dr. BURMEISTER halló en Tucuman "una Laphria muy semejante á la Z.. erythrog-astra" {Andrí/iosoma eryíhrogastraSc\ú-a.)c\\iQ no conozco todavía". (E. Lch. A., op. c, 229 et Sep., 29, nota). Señala además en Mendoza, " una pequeña Laphria, la cual se encuentra también en el Brasil " (op. c. I, 3 1 7). 8. ASILINA. ff2. üIALLfíPHORA Serv., Mcq. Mallophora Serv., Mcq.; S. á Buff. I, 301 (1834). Megaphorus Big., Ann. Soc. Ent. Fr., ser. 3^, V, 532 et 542 (1857). - 146 — * 116. Bergii E. Lch. A., op. c. IX, 257, 24; Sep., 35, 24 (1880). Rep. O. del Uruguay (E. Lch. A.); Buenos x\yres, Chacabuco. * 117. Bigotii. Var. Asili scopiferi Wied., Auss. zwoifl. Lis. I, 479 (1828). ((31. soccata Thoim.n E. Lch. A., op. c. IX, 256,23; Sep., 35, 23 (1880), non Thoms.. Buenos Ayres (Wied.), tíeljraao. Plores, Las Conchas y Baradero (E. Lch. A.). * 118. lugubris E. Lch. A., op. c. IX, 252, 20; Sep., 30, 20 (1880). Misiones (E. Lch. A.). 119. nigriventris Jaenn., Neue exot. Dipt., 53,66 (1867).— E. Lch. A., op. c. IX, 254, 21; Sep., 32, 21 (1880). Paraguay (Jaenn.). * 120. rufieauda (Wied.) Wlk., List of Dipt. VII, 578 et 580, 17(1855). -Schin., Vorh. z.-b. Ges. XVI, 687 et 711 (1866) ot XVII, 3-6, 65 (1867). — E. Lch. A., op. c. IX, 230, 19; Sep., 30, 19 (1880). Asüus rufieauda Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 476, 78 (1828). * Malloplwra soccata Thoms., Eug. Resa, Dipt., 467, 35 (1867). Montevideo (Wied., Wlk., Schin.); Banda Orien- tal (Burm., Reise etc. I, 489); Rep. Argentina (V. der Wp., Tijdschr. etc. XXII, Versl., 21, 1879), Buenos Ayres (Thoms.): Buenos Ayres, Baradero, Choscomúsy Las Conchas (E. Lch. A). — 147 -- * 121. seutellaris E. Lch. A., op. c. IX, 254,22; Sep., 33, 22 (1880). Misiones (E. Lch. A.) Observación.— «El Dr. BURÍMEISTER (V. Reise La Plata-Staat. I.489. 1861) halló en los alrededores del Paraná (Entre-Riosj una especie de Asilas, próxima al A. iii/er/ia¿is 'Wied. y semejante al A. rujicaitda. pero doblemente grande, el cual era nuevo á la sazón: trátase, pues, de una Mallophora diferente de las que he enumerado ". (E. Lch. A., op. c. IX. 259 et Sep.. 37. nota). El Prof. VAN DER WULP halló, fuera de la M. ritjlcauda, dos especies mas de este género entre los Asilides argentinos que le enviara el Dr. WEYENBERGH (V. Tijdschr. etc. XXII, Versl., 21. 1879). 13. PROCTA€A]\TlH.fS Mcq. Proctacanthus Mcq., Dipt. exot. I, 2, 120 (ISiS). ACANTHODELPHLl Bíg., Arü. SoC. Ellt. Fl'., SGl'. 3% V, 532 et 545 (1857). * 122. eruentus E. Lch. A., op. c. IX, 264, 30; Sep., 42 30(1880), Misiones (E. Lch. A.). 123. leueopogon (Wied.) Schin., Yerh. z.-b. Ges. XVI, 683 et 714 (1866) et XVII, 395, 92 (1867). — E. Lch. A., op. c. IX, 261, 28; Sep., 39, 28 (1880). Asiius leucopoijon Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 430, 9 (1828). Montevideo (Wied., Schin.). 124. maerotelus Wlk., List, oí" Dipt. VII, 650 et 653, 13 (1855).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 714 (1866).— E. Lch. A., op. c. IX, 260, 27; Sep. 39, 27 (1880). Asiius maerotelus Vlk., Tr. Linn. Soc. XVII, 340. 24 (1837); List of Dipt. H, 420 (1849). llep. O, del Uruguay. /. de fi'omíi («Gorritew. Wlk., Schin.). * 125. rubriventris Mcq., Dipt. exot., Suppl. 4, 87, 11, p]. 8, f. 3 (1850). -Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 714 (1866). -E. Lch. A., op. c. IX, 259, 25; Sep., 37, 25 (1880). — 148 — Asilus (Proctacanthus) xanthopognn l>urm., Reise etc. I, ai 7 et II, 171 (1861). Erax speciusus Phil., Verh. z.-b. Ges. XV, 693, 3, pl. 26, f. 28 (1P65).— Schin., op. c, 713 (1866). Brasil (Mcq., Schin.); Chile, prov. Colchagua (Phil.); Rep. Argentina (V. der Wp., 1. c), Men- doza (Burm., Rond., Dipt. al. etc.), Tucuman, Monteros (Burm.), Buenos Ayres, Ihoenos Ayres, (E. Lch. A.); Montevideo. Observación.— GERSTAECKER (Bericht i>i Wiegm. Arch. XXXIII. 2. 417. 1867) y VAN DER WULP (Tijdschr. voor Entom. XXII, Versl., 21. 1879) han referido ya el Erax spcciosjcs Phil. al género Proctacanthus, mas sin echar de ver su identidad con el P, rubrivetitris Mcq. El segundo de estos autores halló otra especie, al parecer inédita, entre los Asilides argentinos que le comunicó el Dr. WEYENBERGH (V. 1. c). 126. vetustus Wlk., List of Dipt. Vil,, 650 et 653. 1 i (1855).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 714(1866). — E. Lch. A., op. c. IX, 260, 26; Sep., 38, 26 (1880). Aúlus vetitslMS Wlk., Tr. Linn. Soc. XVII, 340, 23 (1837); List of Dipt. II, 420 (1S49). Rep. O. del Uruguay, /. de Gorríti («GonitQ». \Vlk., Schin.). * 127. vittatus E. Lch. A., op. c. IX, 261, 29; Sep., 39, 29 (1880). Misiones (E, Lch. A.). 14. KR4X Scop., Mcq. Erax Scop., Mcq., Dipt. exot. I, 2, 107 (183S). * 128. flavidus (Wied.) Wlk., List, of Dipt. VIL 626 et 639, 70 (1855).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 713 (1866).— E. Lch. A., op. c. X, 111 et 116, 34; Sep., 45 et 50, 34 (1880). Asilus flavidus Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 473. 74 (1828). Brasil (Wied., Wlk.. Schin.); Buenos Ayres (Baradero) y Rep. O. del Uruguay (E. Lch. A.). — 149 — 129. flavidus Mcq., Dipt. exot. I, 2, 114, 15 (1R38).— Wik., List of Dipt. VII, G25 et 637, 62 (1855).— Schin., Veril, z.-b. Ges. XVI, 713 (1866).— E. Lch. A., op. c. X. 119, 37; Sep., 53, 37 (^-80), ncc (Wied.) Wik. E. melíinus (Wied.) Wlk.? (V. N° 131). «Desde la desembocadura del Uruguay hasta Misiones» (Mcq.) 130. longiterebratus Mcq., Dipt. exot., Suppl. 4, 83, 50, pl. 8, f. 7 (1850).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 713 (1866).— E. Lch. A., op. c. X, 120, 38; Sep., 54, 3R (1880). Patagonia (Mcq., Schin.). 131. mellinus (Wied.) Wlk., List, of Dipt. VII, 625 et63S, 63 (1855).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 686 et 713 (1866) et XVII, 393, 85 (1867).— E. Lch. A., op. c. X, 119, 36; Sep., 53, 36 (1880) Asilus mellinus Wied., Áuss. zweifl. Ins. I, 465, 60 (1828). Erax fiavidus Mcí].? (V. N° 129). Montevideo (Wied., Wlk., Schin.). * 132. patagoniensis Mcq., Dipt. exot., Suppl. 4, 83, 49 (1850).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 713 (1866).— E. Lch. A., op. c. X, 111 et 114, 33; Sep., 44 et 48, 33(1880). Patagonia (Mcq., Schin.); Buenos Ayres (Las Conc/ias, Zarate y Baradero) y Mendoza (E. Lch. A). * 133. senilis (Wied.) Wlk.. List of Dipt. VII, 626 et 639, 69 (1855).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 687 et 713 (1866).- E. Lch. A., op. c. X, 110 et 113, 32; Sep.. 44 et 47, 32 (1880). Asilus senilis AVied., Auss. zweifl. Ins. I, 471,70(1828). Asilus (Erax) senilis Wlk., op. o. II, 400 (1849). Montevideo (Wied., W^lk., Schin., E. Lch. A.); - 150 — Córdoba (V. d. Wp., Tijdschr. etc. XVIII, 16. 1875); Costa Oriental del lüo Urugua}^ (E. Lch. A.). * 134. singularis Mcq., Dipt. exot. I, 2, 111, 8, pl. 9, f. 10 (].:;38).— Wlk., List, of Dipt. Vil, 631, 40 (1855).— Schin., Verh. z.-b. Ges. XVI, 713 (1866).— E. Lch. A., op. c. X, 110 et 111, 31; Sep., 44 et 45, 31 (1880). «Desde la desembocadura del Uruguay hasta Misiones» (Mcq.); Buenos Ayres (Belgranoy C/ia- cahuco) y Montevideo (E. Lch. A.) * 135. striola (Fabr.) Wlk., List, oí Dipt. Vil, 625 et 635, 50 (1855).— Schin.. Verh. z.-b. Ges. XVI, 686 et 713 (1866) et XVII, 392, 82 (1867).— E. Lch. A., op. c. X, 111 et 117, 35; Sep., 45 et 51, 35 (1880). Dasypogon striola Fabr., Syst. Antl., 172, 38 (1805). Asilus striola Wied., Dipt. exot., 199, 31 (1821); Auss. zweifl. Ins. I, 464, 58 (1828).— Wlk., List oí Dipt. II, 432 (1849). Asilus (íiiristicii'S) striola Burm., iieise etc. II, 171 (1^^61). Brasil (Fabr., V^^ied., Wlk., Schin.); Tucuman (Burm.); Buenos Ayres (E. Lch. A.). Observación. — Habiéndome apercibido de que SCHINER (Op. c. XVII, 392) ha ilistinguido satisfactoriamente este Erax del E. maculatics Mcq., considerado por mi (I. c.) como un simple sinónimo suyo, admito ahora la independencia especifica de ambos insectos. El Prof. VAN DER WULP (Tijdschr. etc. XXII._ VersI.. 21. 1879) señala en la Rep. Argentina algunos pequeños 'Asilinos, pertenecientes en parte al género Erax, aún no determinados específicamente. «5. PKOrTOPltáBRUí* Schin. Proctophorus Schin., Verh. z.-b. Ges. XVT, 666 et 674 (1866). * 136. eonnexus (Wied.) Schin., op. c. XVI, 689 et 712 (1866).— E. Lch. A., op. c. X, 120, 39; Sep., 54, 36 (1880). — 151 — AsUus conncxus Wied., Auss. zweifl. Ins. 1, 497, 110 (1823). Trupanea connexa Wlk., List of Dipt. VII, 588 et 592, 29 (1855). Montevideo (Wied., Wlk., Sciiin.); Buenos Ayres, Chacabuco (E. Lch. A.). 7ñ. ivEoinoeiiTHERVü o. Sack. Neümochtherus o. Sack., Cat. N. Am. Dipt., ed. 2'\ 82 (1878). MocHTHERus Loew, Linn. Ent. IV, 58 (1849), nt'cSchmidt- Goeb. (1846). Heligmoneura Big. in Thoms., Arch. ent. II, 352 (1858). * 137. rufipaipis (Mcq.). Asilus rufipalpls Mcq., Dipt. exot. I, 2, 146, 29 (1838). —Wlk., List of Dipt. VII, 698 et 705, 147 (1855). Mochtherus rufipalpis E. Lch. A., op. c. X, 174, 40; feep.,-56, 40 (1880). «Desde la desembocadura del Uruguay hasta Misiones» (Mcq.); Montevideo y Buenos Ayres: Bel grano (E. Lch. A.) y Chacabuco. 77. ilSILlTS L. (s. lat.). Asilus L., Fauna Suec, 308 (1746). — Loew, Linn. Ent. III, 410 (1848). * 138. euyanus (Eutolmus?) E. Lch. A., op. c. X, 175, 41; Sep., 57, 41 (1880). Mendoza (E. Lch. A.) 139. mueidus Wlk., Tr. Linn. Soc. XVII, 340,25 (1837). Patagonia, Punta Santa Elena (Wlk.). 18. I^EPTOIIARPACTICIIS E. Lch. A. Leptoharpacticus E. Lch. A., op. c. X, 178; Sep., 59 (1880). — 152 — AsiLus, grup. 7" spec. Americae Merid., Wlk., l.ist of Dipt. VII, 699 (1855). * 140. Mueius (Wlk.) E. Lch. A., op. c. X, 180, 42; Sep., 61, 42 (1880). AsUus Mueius WJk., List of Dipt. IT. 463 (1849) et VIL, 697 et 707, 158 (1855). Montevideo (Wlk.); Costn. O. del Rio Uruguay (E. Lch. A.). 79. OMMATIITS Illig., Wied. Ommatius Illig., Wied., Auss. zweifl. Ins. I, 418 (1828). Observacioi^. — "¡Mi colección contiene, además, otros dos Asilites. que no me es posible determinar por ahora con seguridad: del uno no conozco ni siquiera el género, pues no poseo sino un ejemplar J sin antenas; el otro es un " Omiuaiius Illig." Wied. (Auss. zweifi. Ins. I, 418. 1828). nuevo al parecer, del cual no tengo sino un individuo sumamente mutilado: ambos han sido hallados en esta provincia por mi hermano". "Según VAN ]>ER WULP (Opmerkingen omtrent uitlandsche Asiliden, 3. 1870). el Asiliís Belzebul Wied. parece no encontrarse ya en el museo de Leiden, al cual pertene- cía el tipo, pero, en cambio, se halla en él, bajo otra etiqueta, un gran Asilide de IMuiitcvideo, al cual se le aplica en parte la descripción de WIEDEMANN, mas no lo suliciente para que se le pueda considerar como individuo de aquella especie; por otra parte, las nervaduras de sus alas se asemejan mas á las de los Láfrites que á las de los Asilites, y el autor citado no sabe con certeza á cual de estos grupos pertenece: por lo que a mi se refiere, ignoro de qué especie trata el distinguido colega holandés " 'E. Lch. A., op. c. X, 181 : Sep.. 62, nota. 1880;.; XIV. MIDASIDAE. 8O. MI® AS Fabr. Mydas Fabr., Ent. Syst. IV, 252 (1794).— Gerst., Monogr. [yi Stett. Ent. Ztg. XXIX, 73 et 93 (1868). Midas Dum., Dict. d. scienc. nat. XXXI, 47(1819).— Wied., Monogr. generis Midarum in Nova Acta Acad. Nat. Cur. XV, p. 2", 19-56, ciun 3 tab. (1831). 141. apiealis Wied., Auss. zweifl. Ins. II, 629, 34 (1830); Monogr. %n Acta Acad. Nat. Cur. XV, p. 2% 48, 14, tab. 53, f. 14 (1^31).— Westw., Arcana Entom. I, 53, 29(1841-1843).— Wlk., List, of Dipt. VI, 363 et 365, 26 (1854).— Gorst., op. c, 96, 9 (1868).— Schin., Nov. lleise, Dipt., 153, 2 (1868). {Continuará} OBSERYÁTIONS á propos du sous-ordre des Araignées Terrilelaires (T e r r i t e 1 a r i a e) spécialement du genre Nord-Américain Catadysas, Hentz et de la nouvelle famille Mecicobolhrioidae, Holmb. (avec I planche) par Eduardo Ladislao Holmberg. I. CATADYSAS. Quoique jusqu'á présent mes investigations arachnologi- ques se soient limitées aux membres de la. Faiine Argentine, je n'ai pu faire abstraction, comme il est facile de le com- prendre, des représentants des autres Faunes^ á cause des relations systémaüques qui unissent tous les chainons de la Faune Universelle. Les íiptitudes de travail, personelles oii dpterminées pal- les éléments externes, signnlent a chaqué auteur les degrés de développement de son activité, et il est impossible,á cause meme de cela, d'exigerdetous un résulttit identique. Thorell peut écrire On European Spiders, et faire la loi en cette matiére; — Vinson, sans autres textes que les Insectes Apteres de V/alckenaer, n'a pas un horizon trop vaste , et doit par conséquent faire des descriptions isolées. C'est ce qui arrive lorsqu'on se trouve loin des centres scientifiques, en prole aux difficultés bibliographiques: on touche du duigt les défauts, on connait peut-etre le chemina — 154 — suivre, maisilfautenresterlá. S'il nefallaitque des consulta- tions, on vaincrait l'obstacle tout de suite, mais ce n'est pas tout. II estnécessaire de Jire, comparer, discuter,passer mille fois l'etre par le tamis d'observations, chaqué fois plus pre- cises, et le lancer enfin á la lumicre du monde avec l'espoir d'uiie fortune, plus d'une fois vacillante malgré tous les efforts. L'nnagination qui garde ses trésors sans altérer leur grandeur mesure de la m§me maniere les anciennes et les nouvelles découvertes et, se trompant parfois sur leur valeur relative, les place á cute quand el les devraient etre bien loin les unes des autres. C'est á propos d'un cas de cette nature que j'ai eul'idée d'écrire cet article, croyant que, peu importe d'oü elle vienne, toute découverte est un progrés. Aussitot aprés avoir terminé l'impression de mon dernier travail (') dans lequel il avait fallu m'occuper des Théra- phoses, je congus le projet d'écrire sur les Araclmides Ar- gentinos un ouvmge á peu prés dans legenre de celui de Hahn et KocH, DieAracImiden, dans lequnl je pus-^^e introduire des monographies cu des descriptions isolées, ce que je réalisai bientot (^)en commengant par les TerrUelariae, dont j'avais la bibliographie presque complete, du moins les principaux ouvrages. Ce n'est pas la meilleure maniere de íaire con- naítre les espéces d'une Faune, mais je crois qu'il vaut mieux les publier ainsi que de ne rien íaire, et que les descrip- tions soient longues, puisque nous sommes loin de cette méthode finale qui supprimera un jour toute description spé- ciale, comme le disait Charles Stal dans Rccensio Ortho- pterorum. (1) Aráctñdos de la Pampa austral y de la Patagonia septentrional dans V Informe oficial de la Comisión Científica agregada al Estado Mayor General de la Expedición al Rio Negro, bajo las órdenes del General D. JULIO A. ROCA, Buenos Aires. 1881. (2) Géneros y especies de Arácnidos Argentinos dans les Anales de la Sociedad Cien- tífica Argentinti. lül. — 155 — Je savais que les Territelaires étaient divisées en trois fa miDes (Thorell) ou sous-íamiUes (Ausserer): Catadysoi- (lae, Liplüstioidae et Theraphosoidae. J'avais le travail de SchiOdte sur le Liphistius desuUor, et je connaissais p;ir les monographies d' Ausserer, l'observation due á Cambridge sur l'existence des filiéres dans ce curieux chaínon-h\; il me manquait seulement Touvrage deHENTz pourrecueiUir plus de renseignements sur son genre Caladysas, qui me semblait assez singulier, en jugeant par ce que j'avais iu dans les travaux de Thorell et d' Ausserer. Heureusement, je viens de recevoir celivre(^) et j'avoue que j' ai été aussi surpris en voyant la figure qu'on y trouve (Tab. 17, fig. 16) du Cata- dysas pwmiius, que le seront peut-étre beaucoup d'arach- nologistes s'ils admettent avec moi que le genre Catadtjsas n'est autre chose que le genre tres connu d'outremer: Zara. Je pourrais exprimer lesraisons qui m'obligent á íormuler cette synonimie par les mots: « Catadysa s = Zora » mais comme je ne suis pas autorité en cette matiére, sur- tout lorsqu'il s'agit d'un genre qui n'existe pas dans la Ré- publique Argentine, il me faut en faire part au lecteur de la meme maniere que j' ai procede pour arriver á ce résultat. (*) Si nous comparons la figure de Cotadysas pumilus (v. /. c.) avec celle de la Zora spi¡ii)iiana que C. L. Koch a publié dans Die AracJmiden (Tf. 481, f. 1B43) on ne trouve pas une seuie difierence remarquable dans les contours, de maniere que nous devons commencer inmédiatement l'exa- men des partios^ en prenant pour base la description du genre et de l'espéce de Hentz (op. c. p. 160). (3) NICHOLAS MARCELLUS HENTZ, M. D. — The Spiderso/the United Siates (Occasional papers of the Boston Society of Natural History, 1875). (■<) Je profite de l'occasion pour communiquer a mon lecteur un autre synonime tres probable que j'ai trouve dans le méme ouvrage: Thalamia HENTZ ^ Oecobius, LUC. La diffórence fondamentale de Thalamia reside dans la longueur relativa des pattes, mais, á ce qu'il parait, HENTZ n'était pas tres minutieux dans les mesures. — 156 - "Katadysas". "Characters. Eyes eight, stibequal, in tworows, both cttrved doiunwards; fang o/ ihe cheliceres articiilated dmvnmards; palpi itiserted mar the extremity of the inaxillae. Feet 4. i. 2. 3. Pultnonary orífices only iiuo." Observations. This very anomalous spider. found only once, offers a very striking instance of the maiuier in which nature combines characters, so as to sepárate widely animáis which are apparently closely allied. This has al 1 the essential characters oí Mygale. but one Chaving but two pulmonary orífices), and yet it is obvioüsly relatad to Lycosa, near which it should be placed in a natural arrangement. I know nothing of its habits, except that it dwells or hides iinder stones. It probably makes no web. '■•Habitat. Alabama. "Katadysas pumilus. Pl. 17, fig. 16. ^'Description. Livid, testaceous; cephalothorax with two longitudinal bands near the middle, and two curved fillets near the edge, fuscous; abdomen with a Une bifurcated anteriorly on the middle, and two lines of minute dots on the sides, fuscous: same colour underneath, with minute fuscous dots". ''Habitat. North Alabama. Under stones." Yeux. — Dans les genre lora., les yeux sont les memes de Catadysas. mais quelques-uns des auíeurs que j'ai consultes a propos de celui-lá ne s'expriment pas tons de la meme ma- niere. Je vais citer quelques exemples: WESTRING, N. Aratieae Svecicae, i86i,p.324 : "O culi 4 antici, perpendicu- lariter et a postice inspecti, propter frontis formam in seriem recurvatam digestí, sed, ab antice contetnplati, in scrie7n rectam digestí vídentur; series postíca val- de recurvata ; oculi laterales postici ab oculis lateralibus anticís duplo, saltem dímidio longíus quam oculi intermedii antici et postici ínter se distant: oculi dúo intermedii seriei posticae majores quam oculi serie! antícae " SIMÓN. 'E.,Hisf. Naturelle des Araignées, 1864, p. 371. "Yeitx peu inégauxet sur deux lignes: l'antérieure /rííy/íí" droite, tres rapprochée du rebord mandi- bulaire. Les yeux intermédiaires en sont un peu plus petits que les latéraux: ligne supérieure trés-courbée en avant. yeuxégaux et plus gros que les antérieurs. SIMÓN E. Les Arachnides de France, T. IV. 1878. p. 314. "Yeux antérieurs en ligne droite ou presque droite, assez resserrés, égaux ou les médians plus gros. . . OHLERT, E. Die Araneiden o. editen Spin. d. Prov. Preussen. 1867, p. 129. "Die Augen der vordern Reihe klein in schwach gebogener Linie" .... STAVELEY, E. F. British Spiders, 1866, p. 52. (Hecaérge) "Eyes. Four large and four small. The four small form a small crescent next the face, the four large form a larger crescent behind them. The crescents have their convex side to- wards the face". (In H. spinimana) : The two inner eyes of the front row are larger thaii the two outer" . ("Tab. I, f. 4 wrong). KOCH, C. \..Die Arachnidcn. Tf. 481, f. 1343. HENTZ. N. M. (s. supra). — 157 — La disposition des yeux de Zora aab mUice. . . An seriem ■rectam » de Westring, a été exprimée par tous, ou presque tous les auteurs. avec une forte courbe, renforcée lorsqu'il y a des figures; mais n'en fut-ilpas ainsi, il n'est pas difficile d'y reconuaitre , surtout dans les figures qui accompagneut parfois les descriptions, les yeux de Cata- dysas, et á plus forte raison si l'on examine le front de la figure 16, oíi la courbe determine i'arc des yeux antérieurs: «. . . .perpendiculariter. . . .propter frontis formam in se- riem recuruatam digesti» sont les termes de Westring. Cette disposition des yeux est un des éléments qui rap- prochent Catadysas des Ly coses, comme Hentz meme l'a reconnu et comme Thorell l'accepte (OiiEurop. Spíd. pp. 43 and 161). Palpes et MACHomES (maxillae).— Catadysas : «Palpiin- serted neo/r the extremity of the maxillae.» ((Near» dit Hentz, c'est-á-dire qu'elles ne s'articuJent pas á l'extrémité meme, ce qui est faux, á en juger par la figure de la bouche (en dessous); aucun arachnologiste n'aurait l'idée de diré que les palpes á'EurypebJia s'articulent imear the extremity» puisque l'extrémité n'est pas celle d'une dia- gonal e convenue, sinon le bord apical. Mais, faut-il prendre le dessin de Hentz tel qu'il est? Voyons d'abord ce que les autres auteurs ont dit des má- choires et des palpes de Zora. WESTRING, o^. c, p. 324. "Maxillae breves, tumidiusculae, introrsum ad apicem oblique truncatae, vel extus sensim acuminatae. ita ut ipse apex acutus nec obtusus vel truncatus evadat." SIMÓN, Ar. de France, p, 315. "Lames maxillaires trés-larges á la base; in- sertion du trochanter presque médiane; au-delá de ce point, le bord externe droit; angle supéro-externe obtiis, presque au niveau du sommet." SIMÓN, Hist. N. des Ar., p. 371. "Pattes-machoires courtes, á coxopodites presque droits, plus étroits á la base, tronques á leur extremité interne." STAVELEY. op. €., p. 52. '■•MaxiUae rounded at the end : large at the inser- tion of the palpi; leaning towards the lip, and convex on the under side. Ces divergences ne seraient rien, eu égard au mérite comparatif des ouvrages que je cite, mais c'est qu'il existe , Bol. Acad. IV. 11 — 158 — une raison qui me determine a ne pas accepter le dessin de Hentz des machoires de Catadysas. "So far as it has been possible" comme il est dit dans la Préf'ace écrite par E. Bur- GESS, p. viij «to compare thosedrawingswithspecimensjthey are correct in colors and markings, bui seem to have been drawnwithoutmeasurements, andthelegs in nearly all cases are too short. The figm-es ofthe eyes are generally good,6i/¿ those ofthe maxillae and mandibles are oflittle use.n Je ne doute pas que le dessin de Hentz ne soit exageré, d'autant plus que ranimal étant si petit (et tres probable- ment jeune) l'erreur est bien plus facile. Quant á ce qui se rapporte au palpe, on reconnaít le type de celui de Zara malgré le mauvais croquis. Mandibules. —Les mandibules son verticales dans le genre Zora, s'il faut accepter ce qu'en ont dit quelques auteurs, la figure de Zora spinmana publiée par C. L. Koch et celle de Z. parallela E. Simón (Arach. de Fr. IV, pl. 16, f. 9), c'est- á-dire que, si nous regardons perpendiculairement une Zora, nous ne voyons pas les mandibules dépasser le front, ainsi qu'on l'observe également dans la figure du Catadysas pu- milus, ce qui ne peut signifier autre chose sinon que les mandibules de Catadysas sont verticales. Eh bien! si les mandibules sont verticales, il est évident que le crochet (imguicula mandibulae) ne peut se mouvoir que dans un plan vertical. Mais comme la plupart des auteurs qui se sont occupés des Territelaires ont dit que le crochet s'articule verticalement et que, au lieu de diré que son plan de mouvement est longi- tudinal, ils ont gardé le silence, Hentz a seulement pris en considération l'articulation verticale dans Catadysas, sans diré un sel mot du pian longitudinal, et il a bien fait, parce que, dans Catadysas, ce plan est oblique, á en juger par la figure, puisque la description est si laconique. Le seul exemple que je connaisse de mandibules vertica- les, dans les Territelaires, est Migas paradoxus (L. Koch, — 159 — Die Arachniden Australiens, Tf. 36, f. I, et Ausserer Zi/jaí. Beitrag z. Kenntniss der Territelarien, p. 153) etlecas semble si rare qu'AussERER, l'appelle « merkwürdige Thier.» Pattes. La longueur relative despattes dans Zora et Cata- dysas est: 4. 1. 2. 3, et les spinules des quatre antérieures, si nous comparons les figures de C. L. Koch et de Hentz, ne peuvent se ressembler davantage. CouLEUR. Dans Catadysas c'est le typique de Zo)-o, sans oublier que les dessins obscurs sont presque égaux á ceux de la Z. spinimo/na. Plaques trachéennes. Deux comme chez Zora. Par ce qui precede on voit que le genre Catadysas est loin d'cfñ'ir, comme le pense Hentz, «a very striking instance of the manner in which nature combines characters, so as to sepárate widely animáis which areapparently closely allied.» II n'est pas vrai non plus qu'il ait tous les caracteres essen- tiels de Myyale puisqu'il n'en a aucun. Quant aux affinités qu'il lui trouve avec les Lycoses, on les justifie parfaitement eu égard á la place que Zora oc- cupait il y a peu de temps dans le cadre general de classifi- cation^ d'oii elle a été séparée dans ees derniéres années pour etre placee parmi les Drassides, sans pour cela perdre ses rapports avec les premieres . Aprés avoir demontre la singuhére similitude des deux genres qui ont motivé ce travail. je regrette les modifications apportées au sous-ordre des Territelaires, raais il faut recon- naítre que la rectification d'une erreur est un rapprochement vers la vérité, ultima thule de tout investigateur sérieux. f(Snu)ii cuíquen a écrit Thorell dans la premiére page de son chef-d'oeuvre Rem arks on Synonims. Soyons conséquents avec l'éminent maitre, et, quoique humbles et solitaires ou- vriers, redressons les erreurs qu'il peut avoir commises, — 160 — pensant peut-etre, que tous les observateurs étaient aussi minutieux, aussi prolixes et aussi sérieux que lui. L'éliminatioii d'un groupe fondé sur une erreur d'observa- üonne signifie presque rien. Si Je Nord-Amérique perd son genre Catadysas, ii gagne le genre Zora, et si la sous-fa- mille des Catadysoidae disparait des excellentes monogra- phies d'AussERERj je vais leur donner, pour la remplacer, une autre famille encoré plus intéressante, fondee sur une espéce beauooup plus curieuse que le genre qui vient de s'éteindre. « II. MECICOBOTHRIUM, Holmb. n. g. (Nov. fam. Mecicobothrioidae, m.) Cephalutliorax ovalis, Jongiorquamlatior, capiteparum pro- minente á thorace utrinque rimis bifurcationis bene se- párate ; f o V e a longitudinales; impressiones ra- diantes thoracis sat profundae. Oculi octo in seriebus duabus aeque longis in tubérculo latiere (]uam longiore conforte impositi; series antica procurva, oculis mediis rotundatis, sxternis majoribus ovalibus; series postica recurva, oculis mediis inter se valde sepa- ratis, subrotundatis, externis cum illis paene confluen- tibus, ovalibus. Mandibulae duplo longiores quam latiores, porrectae, pro- cessu apicali interno non tantum munitae, sed etianí al- tero externo acromio instar introrsum arcuato instructae; rima mandibularis crista externa fimbriata, interna serie denticulorum donata. — 161 — ií/(:m//í7(? divaricatae, subquadratae, non denticulatae, mar- gine trochanteriano concavo. Labium plus duplo latius quam longius, leviter convexum, antice rotundatum. Palpi ápice maxillamm inserti (q^ tarso lanceolato, bulbo subgloboso terebro laterali porrecto parte basali recta instructo; Q adhuc mihi ignota). Peííó's proportione 4. 1. 2. 3, pilosiatque spinosi; tibiae tertii paris non deformes; tarsi triunguiculati. Mammilíae sex, interiores quatuor tenues, breviores, bi-arti- culatae; exteriores longissimae, triaiticulatae, apicem versus sensim attenuatae, articulo apicali reliquis ion- giore, basali breviore crassioreque. Habitat : Intubo sericeo cum rete horizontali Tegcn aria instar. Typus: Mecicobothrium Thorellii,m. Le genre Mecicobothriurn ne peut etre comparé avec au- cun des autres genres connus, telles sont les différences (|ui l'en séparent et malgré les caracteres qui le rapprochent des autres membres du sous-ordre auquel il appartient. C'est en vain que j'ai cherché parmi ceux qu'AussERER a décrits ou cites dans ses excellentes monographies; mes investiga- tions ont été aussi infructueuses dans les autres ouvrages qu'il m'a été possible de consulter: aucune des Territelaires connues n'a, comme celle-ci, des caracteres aussi divergeants du type fondamental, entre autres la fossette longitudinale, que Liphistius meme porte rotundata (selon SchiOdte), II convient done, selon moi, de signaler les caracteres qui l'unissent aux Territelaires, et ensuite ceux qui l'en sé- parent dune maniere evidente. L'aspect general du genre Mecicobothrium n'estpas seule- ment celui des Territelaires, mais encoré, et meme d'une maniere tres remarquable, celui du genre Tcgenaria. L'unique espéce du nouveau genre, malheureusement re- — 162 — presenté par un seul exemplaire mále, a, comme les autres membres du sous-ordre, quatre plaques trachéennes , dispo- sées de la méme maniere que chez ceux-lá ; et le crochet ■mandibulaire articulé detelle fagon que son mouvement se fait dans un plan vertical longitudinal; du reste, beaucoup de ses caracteres se retrouvent dans un nombre variable deThé- raphoses, et plus oú moins fréquemment, ainsi: six fúwres, dont les deux externes beaucoup plus longues que les autres, presque autant que l'abdomen; mandibules dirigées hori- zontalement en avant, leur crochet repose dans une rainure peu profonde dont l'ariste externe est frangée ou ciliée (fim- briata) et l'interne poiirvue de denticules-, huit yeux dispo- sés en tubercule plus large que long, et les palpes inserés á l'extrémité des máchoires. Telles sont les ressemb lances les plus frappantes qui rat- tachent Mecicobothrium aux autres Territelariae. Passons en revue les diñerences. La fossette thoracique longitudinale. surtout, le separe évidemment des autres membres de la famille; le tarse des palpes en forme de palette lancéolée et déprimée, presque de la meme longueur que l'article précédent (10 : 11) est un caractére si nouveau parmi les males du groupe, que je ne connais rien qui lui ressemble ; le bulbe sub-globuleux a un appendice lateral, droit dans sa moitié basilaire et térébri- forme (le tout comme un véritable tire-bouchon)dans l'autre, dirige vers l'extrémité du tarse et parallele a lui, construc- tion singuliére qui rappelle le tarse d'un male de Drasside, d'Agalenide oü d'Attide,&. Enfin, latoile identiqueá celle de Tegenaria, qui nous fait connaítre une napi-iubitele parmi les Théraphoses, est un fait qui n'a pas de précédent, du moins sil me faut m'en rapporter a mes connaissances. Je me demande, maintenant, oü faut-il placer le genre Mccicobothrmm ? Les arguments seraient inútiles et par conséquent jen fais une nouvelle famille: Mecicobothrioidae. — 163 — De telles inodifications apportées á lensemble du sous- ordie des Territelariae m" impose le besoin de formiüer de nouveau le cadre de ses groupes siipérieavs, du moment qu'une famille a dispara pour faire place aune aiitre: TERRITELARIAE Mandibularum unguícula longitudinaliter et verticaliter articúlala. Tracheae quatuor. A. Abdominis tegumentum transversim excissum : Fam. Liphistioidae . B. Abdominis tegumentum transversim haud excissum, id est continuum. I. Fovea thoracica transversa, procurva, recta recurvaque : Fam. Theraphosoidae . 11. Fovea thoracica longitudinalis: Vena.. Mecicobothrioidae. Mainteiiant, si la présence de deux paires de trachées montie une tendance vers la segmentation, sans oublier que ce n'est peut-etre pas un retour mais une persistance, ce qui marquerait sans doute une infériorité, je puis me hasarder á demander: un seul caractére est-il suffisant pour constituer une famille? Sil en est ainsi, Liphistius est bien oíi il est comme famille indépendante. mais ilfautavant de l'accepter comme définitivement limitée faire une étude aussi minu- tieuse de la Mygale solstüialis Hentz (Spiders ofthe United States— Occ. pap. of the Boston Soc. of Nat. Hist., p. 17. Pl, I, f. 2) que celle que SchiOdte a fait du Liphistius desultor. mecicobotliritim Tliorellii, HoLisiB. n. sp. Tab. I. ¡y . M. pallide fuscescenti-olivaceum, cepholothorace dimi- dio longiore quam latiore, antice truncato leviter'que supra mandíbulis recUnato, pustice late suaviterque eonarginato, patellam plus tibiam 4:i paris pedum longitudine supe- rante, tibiam plus metatarsum conjunctim ejusdem paris longitudine non atlingente , sub lente minutissime granu- loso, glabro, vix pilis nonnuUis brevibus in tubérculo oculi- f ero praesentibus; fovea satis profunda, f ere pone médium incipiente; f ovéis radiantihus etiam profundiusculis , in- — 164 — termediis nonnihil transversis, posticis subparallelis ac retrorsis\ — oculorum tubérculo nigricaiite, ociUis mediis cmticis obsciiris, inter se minus quam diámetro disjunctis, reliquis paUidis; sternotriangulari-cordiformi, pilis spar- sis vestito veliiti labio maxillisque; mahdAbularum ápice vallecutaleviac vfrticaiiulroque latere carina denticulata limitata donato, carina autem, interna deorsum vergente processu instar eminente, externa incurva tune introrsum prominente, rima unguicularis interne 8-10 dentibus inaequalibus munita; abdomine pubescente et subsetigero, obovato (postice paulo latiore), colore thoracis, dorso autem fusco, mnculis pallidis ornato. Male. Mesures. LongUL'Ui- totale .... 0^0062 L()n,ííueur de la plaíjue du céphalotho- steniale . . . 0 , 00 1 5 rax 0,003 Largeur ma.xima de (le la tete jus- celle-ci . . . 0,0012 qu"h la fossette 0,0016 Longueur des niachoires 0 , 0008 Largeur de la tete . . 0,0015 de l'abdomen 0.0031 du thorax . . . 0,002 Largeur moyenne de Hauteur ,, ... 0,0012 celui-ci . . . 0,0018 Longuem- des niandi- Longueur des filiéres ex- bules .... 0 , 00 1 1 ternes .... 0,0026 Largeur de chacuned'elles 0 , 0005 „ des filiéres in- Longueur du crochet . . 0 , 00 1 2 ternes .... 0,0006 + Pattes ! II. 4...2.3.|1II. I IV. .Palpes ... — hanche tro- chanter fémur 1 • patella tibia meta- larse tarse TOTAL 0.0012 0.0011 0.0009 0.001 0.0005 0.0004 0.0003 0.0005 0.0004 0.0022 0.001 9 0.0016 0.002 0.0017 0.0011 0.0011 0.0009 O.OOll 0.001 0.0015 0.0011 0.001 0.0015 0.001 1 0.0012 0.0012 0.0013 0.002 1 0.0008 0.0007 0.001 0.0012 0.001 0.0085 0.0075 0.0070 0 0094 0.0052 ~ 165 — Forme. — Le cc'phalothorax microscopiquement chagriné, avec quelques poils ñus daiis la partie postérieAire du tuber- cule oculaire, estpeiiluisant,commelacire (•'), plus long que la patella -\- le tibia IV, plus court que le til)ia -\- le méta- tarse IV, ovale, tronqué en avant et a peine arqué, c'est-;\-dire, recliné sur les mandibules; légérementet largement échancré en arriére, ici plus large qu'en avant, les angles postérieurs arrondis de meme que les cOtés, la moitié plus long que large (3:2); en le regardant par devant, le clypéus est bien arqué et tres peu deprime au milieu; de cote, la tete est assez remarquablement plus élevée que le thorax, convexo, légérement déprimée en arriere du tubérculo oculaire qui est assez proéminent; le bord du thorax est horizontal et s'éléve par dessus les hanches III et IV; les impressions qui séparent la tete du thorax sont bien mariiuées, mais leur ligne estun peu irréguliére, car elle est légérement ondu- leuse et un peu élargie prés de l'angle antérieur — tout prés de la fossette elles sont séparées, de maniere que la ligne dorsale de la tete penetre oú termine dans celle-lá, en lui formant la liujite antérieure; les trois autres fossettes rayon- nantes, de chaqué cóté, sont assez profondes, un peu élargies á leur extrémité externe et occupent, á peu prés, le tiers médiaire de la distance qui les separe de la fossette céntrale et du bord du thorax : les antérieures divergent en avant, les médiaires sont tranverses, trés-peu inclinées en arriére, et les postérieures, presques paralléles en arriére, divergent un peu en dehors; la fossette céntrale, finalement, dirigée dans le sens longitudinal, est assez profonde et comme ex- cavée dans une légére proéminénce thoracique, et porte au milieu, de chaqué cóté, une rainure transverso tres fine et courte, á peine perceptible. Le tubercule oculaire est deux fois plus large que long, touche presque le bord du clypéus avec sa partie antérieure (5) Je ne rappellerai plus ce caractére qui se répéte dans les autres organes. — 166 — oü Ton voit un poil setiforme arqué en dessus; les YA (*) en ligne concave en avant, les YP en ligne concave en arriére; les YMA ont leur axe optique dirige en dessus, et un peu en avant et en dehors, ils sont entre eux aussi separes que les Vs de leur diamétre et autant des Y^LA; une ligne tangente á leur bord antérieur couperait les YLA un peu en avant de leur centre, et en regardnnt par devant, une autre tan- gente á leur bord inférieur le serait aussi du supérieur des YLA, oü leur couperait á peine un segment minime. Les Y^LA sont moitié plus gros que lesYMA, peut-etredoubles. visent en avant et en dehors, leur sclérotique supérieure étant tres petite; les Y^MP qui sont les moins gres, presque ronds, mais peu convexos, sont entre eux aussi separes que les bords externes des Y'^MA, une tangente á leur bord pos- térieur, séparerait le tiers postérieur des LP; ceux-ci sont presque aussi gros que les MA, visent en arriére et en dehors, et se trouvent separes des LA autant que ceux-ci des MA et presque confluents avec les MP. La plaque stcrnale un peu convexe, lisse, couverte de pe- tits poils épars, ovale, plus longue que large, suavement 11-gone, antérieurement tronquee par la base de In lévre, terniinée en arriére en angle obtus formé par les deux cHés qui correspondent aux hanches IV; de chaqué cote de la lévre il a un petit bord qui correspond a ]a máchoire; sa partie la plus large setrouve entre les hanches II; hors les bords maxillaires, les autres sont presque égaux. La levre, presque trois fois plus large que longue, est ar- rondie en avant, et ses bords latéraux ne sont que la con- tinuation de l'antérieur en passant vers la base, convexe, avec des poils courts comme ceux de la plaque sternale mais plus épars; inclinée en dessous, et, á ce qu'il paraít, avec une frange tres interne, rare et fine; en la regardant un peu d'ar- (6) Y = yeux; A -- antérieur: L = lateral; P = postérieur; M median, au singu- lier oü au pluriel, selon les circonstances. — 167 — riere en avant c'est á diré un peu plus dans Je sens de sa propre perpendiculaire, elle semble tendré vers la forme du trapéze, mais ses angles libres sont arrondis; dans ce cas sa lonj^^ueur parait augmentée, sans atteindre pour cela la moi- tié de la largeur qui est alors comme 2V2: :i. La machoire est peu convexe, avec des poils courts com-^ me la plaque sternale. presque carree, mais uu peu plus longuequelarge; ses bords interne et coxal sont presque parallf^les, car ils divergent á peine vers lextrémité, le der- nier est le plus long des quatre, ensuite linterne orné d'une frange tres fine, le suivant est le labial ou basilaire qui forme un angle obtus avec linterne, et aigu, arrondi, avec le coxal; le plus court; enün, est le trochantérien, échancré, de ma- niere que son angle interne est avancé et que, dans la moi- tié externe de son échancrure il présente l'insertion du tro- chanter des palpes. Les mandibules sont á peine plus longues que le double de leur largeur, plus courtes que la largeur du front, presque deux fois plus hautes que largos, un peu deprí- meos au-dessus pres de la base; leur tégument est mi- croscopiquement granuleux ou chagriné, mais avec des grains plus apparents que le corselet; elles sont ornees de quelques soies fines sur leur tiers apical et d'autres plus courtes et couchées sur leur face externe, qui s'al- longent prés de la rainure, pendant que l'interne les porte de longueur moyenne; á l'extrémité elles sont pourvues d'une excavation concave et verticale dont Tárete interne, dans sa moitié supérieure, est couverte de denticules co- ni(|ues, tres petites et relativement éloignées, plus rappro- chées dans l'inférieure et graduellement plus grosses en des- sous ayant leur axe dirige obliquement vers le bas et dont les derniéres se courbent un peu en avant et en deliors, Tárete externe graduellement plus avancée, surtout dans sa moitié inférieure, porte des denticules plus grosses que celle de Tautre depuis son commencement supérieur et, se — 168 - courbaiit vers Tintérieure, la ou ses denticules sont plus longues, elle montre l'une d'elles qui est tres grosse, cylin- droide et conique á l'extrémité^ et se cambre d'une telle fa- gon que son extrémité meme avance jusqu'au devant de la moitié inférieure de Tárete interne (') sans la toucher, rappelant par sa forme Tacromion de lomoplate humain; Tárete interne descend un peu plus que Texterne et toutes deux ont des soies plus ou moins grosses et entremélées, surtout en dehors ; les deux aretes qui semblent ainsi se rapprocher Tune de Tautre á la hauteur de Tacromion, se séparent un peu au-dessous, et en faisant un petit tour se joignent au moyen dune faible arete semicirculaire. fine- ment denticulée, placee au dessus de Tarticulation du crochet; la rainiire oíi celui-ci repose n'est pas tres pro- fonde et se montre comme un aplatissement limité par les aretes habiiuelles, plus séparées tout-prés de Tarticu- lation du crochet; Texterne, á peine saillante, est pourvue d'une frange de soies longues etrapprochées, et Tínteme de S á 10 denticules coniques, relativement fortes et un peu inégales, dont les plus grosses sont cellos du tiers median qui ont leurs axes un peu obliques en avant; cette serie de dents est placee au dehors d'une autre frange interne par rapport au plan vertical longitudinal de Taraignée, mais au dedans si Ton considere le meme plan de chaqué mandibule; la rainure, tout prés de la base mandibulaire, oíi les franges se touchent presque, ont, á ce qu'il parait, des denticules tres petites, éparses, mais rapprochées de la serie de dents. Le chrochet est luisant, aussi long que la mandibule, reguhérement arqué, un peu conde tout prés de la base plus large, et un peu plus fortement aniué prés du bout tres aigu. C) II faut ne pas oublier que quand je parle d'inférieur. extérieur. intér-ieur, etc., je prends pour base les plans généraux de l'animal. á moins qu'une exception n'in- dique le contraire. II me semble presque inutile de rappeler que la position est celle que Taraignée adopte dans un plan horizontal, c'est-á-dire que la plaque sternale. par exemple. est dans ce plan, de meme que le ventre, etc. ~ 169 - Les palpes minees, revetus de poils tres fins et d'épines peu nombreuses, sont graduellement plus robustes depuis Textréinité dii fémur en avant, un peu plus longs que Ja moitié de la longueur des jambes IV et plus courts que chacune d'elles; leiir fémur, un peu comprimé et légérement aristé en dessous, se courbe en dessus et en dedans comme dans la plupart des Territelaires, sa gros- seur étant á peu prés celle du métatarse I; la patella est comme trois fois plus longue que large, et un peu rétré- cie á la base; le tibia est imperceptiblement plus long que la patella, cylindroide, mais plus étroit vers ses ex- trémités, de maniere qu'on pourrait diré qu'il est ovoide- oblong-, le tarse peu convexe, est aussi long que la patella, son contour basilaire, en le regardant par dessus, ayant la meme forme que la base du tibia, mais se rétrécissant ensuite, de maniere qu'il a un contour general lanceóle; au milieu de son bord externe inférieur, il porte une large échancrure assez profonde qui commence avec le tiers médiaire, aprés un angle droit avancé, qui termine le tiers basilaire; par cette échancrure on voit le bulbe dépasser un peu le bord; au bord interne il y a une échancrure aigüe, de telle faQon que le bord basilaire de celle-ci, en s'unissant á la partie du bord du tarse entre l'échancrure et la base de l'article, forme une dent pointue, et l'autre bord qui la limite, se fond avec 1' apical du tarse, comme il arrive aussi dans l'autre échancrure; en dessous. le tarse est excavé longitudinalement dans ses deux tiers basilaires, cette excavatiou commengant un peu plus au delá de sa base; le bulbe s' articule au com- mencement de cette dépréssion : — il est ovoide, un peu plus long que large, son extrémité dépasse un peu la moitié basilaire du tarse, et atteint á peu prés la dent aigíie du bord tarsal interne; — on distingue sur sa sur- face une rainure rélativement large, qui s'origine en de- hors et á la base, marche obliíiuement vers 1' extrémité — 170 - et en dedans et, se courbant, retourne á la base, prés du bord interne, de maniere que, en dedans de cette portion recurrente, c'est-á-dire, entre elle et la base de l'apophyse elicoide, le bulbe est un peu gibbeux, l'étant raoins, mais plus largement, entre les deux branches de la rainure liippocrépidée; comnie le bulbe se détourne un peu en dehors, il existe un certain espace entre lui et le bord externe du tarse de maniiM'e que c'est la ou l'apophyse elicoide ou en forme de tire-bouchon se loge, — cette apophyse, tres singuliere, se juint á la base du bulbo, et se dirige vers Textréinité du tarse, (p'elle atteint; — sa partie basilaire est plus grosse et s'amniincit peu á peu; elle y est simple, pas précisement droite córame il est dit dans la diagnose, mais un peu courbe, suivant dans un certain degré le bord tarsal interne, mais aussit t qu'elle outre-passe la dent aigüe de ce l^ord, elle fait trois tours d'hélice, et le commencement d'une quatrieme spire, finissant a la hauteur de l'extrémité du tarse, duquel elle est complétement séparée dans toute sa longueur. Les épines des palpes sont distribuées ainsi: fémur cu dessus: 1. 1. 1. 2 oü 1. 1. 1. 1. 1 ; en avant: 1; tibia en dessous: 2. 2. 2; ees derniéres ne se ti'ouvent pas com- plétement par paires, et quoique plus loiigues et arquees que celles du fémur, elles sont cependant moins grosses. Les janibes de longueur moyenne, sont a peu prés d'une grosseur égale, quoique les derniers articles des quatre antérieures sont un peu plus robustes que les correspon- dants des postérieures ; celles-ci sont, done, plus gráciles; elles sont couvertes de poils fins comme les palpes, de mani:'re que le tégument n'en est pas caché, pas m'-me aux tarses oü leur plus grarid rapprochement fait croire á l'éxistence d'une brosse (seopula) ; elles ont quelques soies táctiles á la patella et au tibia. Les hanches sont tres saillantes et robustes; les /rniins, moins gros vers leur extrémité, son assez gibbeux au dessus. a la — 171 — base; les aiitérieurs sont arques en avant, les aiitres en arritre, et tous ont des poils plus longs et rélative- ment rigides en dessous; ceux du tibia, metalarse et tarse, quoique plus flus et courts, sont plus rapprochés; ees derniers articles sont cylindriques ; les tarses des jambes I et II, sont arques en dessus, c'e4-á-dire que la concavité est supérieure; les (juatre tarses sont tron- ques obliquement au dépens de la partie supérieure de l'extréniité. Les griffes sont hétérogénes, conime dans le genre Scytodes (*) et autres ('); il y en a trois dans chaqué tarse, deux supérieures (Ilauptkralle) et une in- férieure (Afterk ralle). Dans les quatre tarses antérieurs, tres remarquablement echancrés á l'extrémité, la griffe antérieure est bipectinée, et ses dents sont assez obliques, pendant que ceux de l'autre, qui n'est pns bipectinée, sont plus perpendiculaires; la griífe iuíérieure est tres petite, sans aucune dent, du moins si mes observations son exactes, ce que je crois paice qu'elles ont été minu- tieuses. Dans les quatre tarses postérieurs les griffes sont simples oü unipectinées, et leur cinq dents sont obliques et un peu irreguliéres, car elles ne sont pas droites, mais bien un peu onduleuses; la petite griffe in- férieure est plus grosse que celle des autres tarses, étant armée de deux dents, tres fines et aigües; le tarse lui mOme n'est pas echancré. Les épines des jambe= sont distribuées ainsi: 1 & II: Fémur en dessus: l. l. \\ ett ai'ant: 1. Patella en avant et en dessus, a l'extréniité: 1. Tibia eft avant: \. 1; en dessons : \. l. 2. Metalarse en avant: l ; en dessous : 2. 2. 2. Ill & IV: Fémur en dessus: l. 2 (il y a vraiement l. 1. 2. mais la deuxiéme a plus l'aspect d'une soie (]ue celle (.l'uiie épinej; (**) Du moins dans Tespéce Se. macnlata HOLMB. Inf. of. de la Com. Cient. de la Exped al Rio Negro, Arácnidos. (^) Peut-étre en est-il ainsi dans d'autres genres de Territelarix. — 172 — en avant: i. Patella en avant: l. l oCi i; eji arriere: l. Tibia en dessus : i ; ett avant: \. i ; en arriere: 1. i oü 1. 1. \\ en dessous: 1. i. 2 oü i, i. ;{. Metalarse en des- sus: 1; en avant: 1. 1. \\ en arriere: 1. 1. i ; en dessous: 2. 2. 2. En general, on peut diré que l'épine caractéristique iles fémurs est la premiére oú basilaire, qui est plus forte et plus longue que les autres('"). h'abdomen ovoide est un peu plus large en arriére qu'en avant, et sa longueur n'atteint pas le double de sa largeur moyenne; il est un peu conché (recliné) sur le thorax, postérieurement il est un peu tronqué, car les filiéres ocupent un aire assez large; il est revetu d'une pubescence un peu couchée dans laquelle ont distingue Qa et la des poils rigides, courts aussi, et plus forts. Les filicres externes sont presque aussi longues que l'abdomen ; leur premier segment est le plus court et le plus robuste; le second est un peu plus long et moins gros; le dernier, plus long (lue les deux basilaires reunis, est le plus minee et s'ammincit peu a peu vers l'extrémité; les quatre autres flliéres n'atteignent pas la longueur du premier segment des externes ; elles sont biarticulées, leur article basilaire est tres petit, et l'autre beaucoup plus long, cylindro-ovoide, celui des intérieures étant plus robuste et plus court que celui des médiaires. Les filihres sont couvertes de polis plus ou moins fins, dont les plus longá revetent les externes. CouLEUR. — Le corselet, les jambes et les palpes sont d'une teinte brune-olivátre palé, oú bruñe ferrugineuse, les palpes et spécialement les mandibules étant plus (•0) S'il m'estpennis de communiquer mon opinión á propos des épines des jambes, je dirai que je suis loin de Taccepter comme un bon caractére especifique et á plus forte raison générique. Pour ceux qui acceptent que l'espéce n'est qu'un ¿tat, et non pas quelque chose de persistant, un caractére aussi variable ne peut se pla- cer á cote de ceux qui sont relativement plus fixes. — 173 — obscurs; toutes les denticules de celles-ci sont iioiratres ainsi que les épines des jambes et Vapophyse elicolde du hulhe qui est lui-meme rouge de brique ; la base du crochet mandihulaire est rougeáti'e; Vaire oplUhalritir/ue est noire ; tous les poils sont brun-clairs ; {'abdomen (et ses dépendences) brun-clair, avec le dos plus foncé, orné d'une serie longitudinale de petites bandes transverses, coudées en avant et de couleur pále. Observations. — Le 8 Mai 1881, jai trouvé au Tandil, petite ville située au pied de la chaíne de montagnes du meme nom. dans la región australe de la Province de Buenos Aires, cette araignée, la plus curieuse que j'aie vue entre autres du groupe auquel elle appartient. Elle habitait un tube soyeux de 2 cm. de longueur, coudé au milieu, et dont une des ouvertures terniinait en nate de 2 cm. carrés, comme la toile des Tegenfiria^ le tout étant abrité sous une corniche. Une doute surgit on moment de finir ma description : cette toile, lui appartenait-elle ? A la meme place ]^\ trouvé des veritables Tegenaria, genre sous lequel jai conservé provisoirement l'espéce, et dont je ne Tai séparée qu'au moment de l'étudier sérieusement, quelques mois plus tard, quoique l'extréme longueur des filieres eveillát mon attention dans le moment de la prendre, et sans l'examiner qu' a la simple vue. Voulant profiter du temps que je devais rester au Tandil (trois jours), je ne voulus faire autre chose qu'augmenter ma collection, ne sa- cha nt point si je pourrais retourner bientU. Comme je ne connais pas de cas d'habitat accidentel dans les Territelaires, je suppose que le tube et la toile lui appartiénnent, en attendant que des observations plus precises me fassent changer d'opinion. Je l'ai nommée d'aprés Thorell, comme un hommage au savant, comme un témoignage de ma reconnaissnnce pour les considérations particuliéres dont jai été l'objet de Bol. Acad. IV. 12 - 174 — sa part. Qu'il veuille l'accepter sous ees titres, et comme Tespéce la plus singuliere de notre Faune arachno- logique. Buenos Aires. Janvier 15. 1882. Eduardo Ladislao Holmbei^g. EXPLICATION DE LA PLANCHE. Fia. 1. Mecicohothriiim Thorellü; l'araignée augmentée (niále) ,,2. „ „ grandfur naturdle. „ 3 Vil de cote; augni. „ 4. „ de dessous; augm. „ 5. Tubercule oculaire. de dessus. „ 6 Mandibule vue de devant. ,,7. „ «de dessous. „ 8. Palpe vu de cóté. „ y. „ „ de dessous. „ ](). Griffes de la preiiiiére paire de jambes. „ 11. „ „ „ quatriéme paire. Bo¿fitir¿ de íaAcadem.ia.l/adonaL "n j y ríe ciencias. T. IV /88t i i . 1 E.L.Holmber^. Oóserv. s. ¿es Territelanae. OUILLERMO RRATT RECONQUISTA 32 B- A^ MPXICOBOTHRIUM IHORELLll, holmberg. MEDICIÓN BAROMÉTRICA de algunas alturas de la Sierra de Córdoba por Osear Doering. Son muy pocas las localidades de la Sierra de Córdoba cuya elevación vertical se conoce, y será una tarea impor- tante proceder á una determinación, en mayor escala, de sus alturas. Esta idea me preocupa desde ha mucho tiempo, pero la dotación, del todo insuficiente, del Gabinete de Física que está á mi cargo, no me permite adquirir los instrumentos necesarios para ponerla en práctica. Por ahora sólo podré dar las alturas de unas pocas localidades, que se han tomado de paso en la Sierra durante dos excursiones, practicadas, la primera, en la agradable compañía de mis distinguidos cole- gas, los Dres. D. Luis Brackebusch y D. Jorge Hieronymus los dias 13, 14 y 15 de Noviembre de 1880; la segunda lo fué con mi hermano, el Dr. D. Adolfo üoeriiv/, en los dias 24, 25 y 26 de Mayo del corriente año. El objeto principal de aquella fué determinar las constan, tes de algunos aneroides, observándolos á distintas alturas : el de la última, examinar si el «Pan de Azúcar», cerro muy conocido aquí, sería adecuado para hacer observaciones en su cumbre durante algunos meses, á fin de contribuir á la resolución del interesante problema que me he propues- to dilucidar. *) Aquí sólo publico las observaciones de aquellos puntos que son mas conocidos, omitiendo las demás, que fueron hechas en parajes sin denominación ó menos conocidos. _') Véase mi trabajo: Estudios sobre la medición barométrica de alturas en la Repú- blica Argentina. Parte I. Bol. d. 1. Acad. Nací, de Ciencias T. UI, pág. 473-512 ~ 176 — La presión atmosférica se ha medido con un barómetro de sifón construido por el célebre Dr. Meyerstein en Gotinga, propiedad del Gabinete de Física y comparado con el baró- metro normal de la Oficina Central Meteorológica. Necesita una corrección adicional de 0.63 mm. Todas las observacio- nes barométricas de la siguiente tabla están reducidas á O" y las correcciones necesarias les han sido aplicadas. La temperatura del aire que tengo apuntada, procede de observaciones hechas en las respectivas localidades, pero no se llevó psicrómetro. La falta de datos sobre la presión del vapor atmosférico se ha suplido de distintas maneras. Agradezco á la amabiü- dad del Dr. D. Benjamín A. Gould, Director del Observa- torio Astronómico, las observaciones de la Oficina Central Meteorológica hechas en los mismos dias de las excursiones. De esos datos se ha calculado la presión del aire atmosférico ó por la fórmula de Hann *), ó tomando una presión media. Advierto que todos los valores observados se hallan en general impresos con tipos ordinarios y los que son el resul- tado de una interpolación, en negrita. **) OBSERVACIONES 1 — 3. Rio Zeballos. El barómetro estaba suspendido debajo del corredor de la casa del Sr. D. Francisco Lujan, á 0.5 m. de altura sobre el suelo. Del promedio aritmético resulta el valor 241. 2 m. Suponiendo la altura del Observatorio Nacional de Córdoba igual á 43S. 5 m. sobre el nivel medio del Rio de la Plata, en frente de Buenos Aires ***), *) Zeitschr. d. Oesterr. Gesellsch. f. Meteorologie. Bd. IX, p. 193-200. '■) Véase las tablas en las págs. 179 y 180. "*) 3. A, Gould, Informe anual de la Oficina Meteorológica de Córdoba, co- rrespondiente al año 1876. — 177 — resulta la altura absoluta de la casa mencionada de Rio Zeballos igual á 679. 2 m. 4. 5. C oían changa. Es el nombre de una población situada á 2 leguas al W. de Rio Zeballos. La carpa, en que se observó, estaba en una planicie á 4 cuadras de la última casa, y mas ó menos á 10 m. sobre el nivel de éste. El pro- medio dá 456. 6 m.— 0.4 m.:==456. 2 m.; altura absoluta 894. 7 m. 6. Cuesta de Quinteros. Altura absoluta 1315. 3 m. Parece la mas alta de las cuestas que cruzan esta parte de la Sierra que se llama «La Primera». 7. 8. San, Francisco en la Punilla. El primer valor (269. 9 m.) debe ser rechazado, porque una tormenta y un viento fuerte indicaron que la atmós- fera no estaba en su equilibrio. Restando del segundo valor, la altura del barómetro encima del Rio de S. Francisco (2.5 m.), se deduce la altura de éste, en frente de la población, igual á 744. 9 m. 9. 10. Cuesta de los Molles. Promedio aritmético 745. 0; altura absoluta 1183. 5 m. 11. 12. Quebrada de Mendiolaza. Se ha observado al pié de ésta. Promedio 305. 3; altura absoluta 743. 8 m. 13. 14. Arroyo de Reducción. Las observaciones se han hecho allí donde el camino cruza el arroyo antes de llegar á la estancia del mismo nombre, á 1.5 m. sobre el nivel del arroyo. Promedio 128. 6, — 1.5=127. 1 m.; ahura absoluta 565. 6 m. — 178 — 15. Reducción. Es la altura del piso de la casa de Reducción que se halla situada á la derecha del camino. 16. 17. Cuesta de Cosquin. Promedio 621. 9 m.; altura del barómetro sobro la cumbre 1 m.; altura absoluta 1059. 4 m. 18 — 30. Pan de Azúcar. El promedio de las 13 observacioues daría 830. 8 m. El valor de la altura absoluta que resultaría, e. d. 1268. 3 m., es inferior al verdadero, en vista del mes en que se ha observado. La anomalía patente en las tem- peraturas observadas, y la falta de un paralelismo aproximado de las curvas que representan la presión at- mosférica en Córdoba y en el «Pan de Azúcar», me deter- minan á no dar gran valor á estas mediciones. Esperaba que una nueva excursión me suministraría resultados de mayor seguridad sobre la altura de aquel cerro. En efecto, con motivo de una visitn con que nos honró el Sr. Dr. D. Domingo Lovisato, profesor de mineralogía de la Universidad de Sassari, — uno de los naturalistas que acompañan al Sr. Teniente Bove en su expedición á los mares australes — hicimos otra excursión pasando la cuesta de Cosquin. Sin embargo, la lluvia casi continua que nos acompañaba en los dias de este paseo (18 y 19 de Noviembre), no me ha permitido hacer observaciones nuevas en aquel punto, las que me he reservado para las vacaciones universitarias. Córdoba, Diciembre de 1881. Osear Doering. - 11 NO Fecha Hora Localidad t- O c tí ü n o !t u O. £ c< H T3 (3 -O <^ Nov. 13 „ 13 » 13 2.40p.m 3.0 p.m. S.-.'Op.m. Rio Zeballos Córdoba. Observ. Nací. Rio Zeballos , Córdoba . . . Rio Zeballos Córdoba . . . 703.2 733.44 702.9 722.34 702.9 733.33 25.0 37.6 25.2 27.8 25.3 37.9 33,0 239.0 242.7 241 4 Nov. 14 14 6.10a. m. 7.0 Colanchanga Córdoba . . . Colanchanga Córdoba . . . 686.4 733.00 685.6 722.75 24.5 17.7 25.0 21.0 11.1 13.0 11.6 13.5 451.4 461.8 Nov. 14 2.50p.m. Cuesta de Quinteros Córdoba 649.4 716.37 27.0 30.7 13.5 17.0 Nov. 14 15 6.30p.m. G.lOa.m. San Francisco Córdoba , . . , San Francisco Córdoba . . . 694. 1 715.5 697.6 733.87 23.0 18.0 14.0 16.0 13.8 15.0 8.1 9.4 876.8 269.9 308.9 lU 11 12 Nov. 15 15 9.45a.m. 0. 5U a. m. Cuesta de los MoUes Córdoba Cuesta de los Molles , Córdoba , . 604.0 733.85 664.3 724.05 170 23.6 17.0 23.3 5.9 8.0 5.7 7.8 746.1 liá.'j Nov. 15 15 1.20 p.m. 2.0 p.m. Quebrada deMendiolaza Córdoba . Quebrada deMendiolaza Córdoba ....... 698.6 733.6 698.4 723.22 22.0 23.5 22.5 23.0 6.7 7.4 6.8 7.5 306.0 304.5 13 14 Mayo 24 26 1.30 p.m. 1.30 p.m. Arroyo de Reducción , Córdoba Arroyo de Reducción . Córdoba 709.6 730.43 712.2 723.75 19.0 16.1 22.0 17.9 10.0 10.0 7.8 7.8 130.0 1,>7.1 Mayo 25 1.0 p.m. Reducción . Córdoba . . 711.3 723.0 22.0 17.6 7.3 7.3 621.4 — 180 — NO Fecha Hora Localidad Presión atmosférica en mm. Temperatura del aire en o C. Presión del vapor atmosf. en mm. Altura calculada en metros 16 Mayo 25 8.0 a.m. Cuesta de Cosquin . . • 673.8 6.2 4.1 621.4 Córdoba 726.04 7.0 5.1 17 Mayo 25 8.15 a. m. Cuesta de Cosquin . . . 673.9 6.5 4.3 622.3 Córdoba 726.8 7.4 5.3 18 Mayo 25 9.10 a.m. 658.9 727.3 10.0 9.3 4.9 6.4 822.0 1 9 » » 11 1.25 a.m. 659.3 737.83 11.0 13.4 4.1 5.5 828.8 20 » » 11.0 a.m. 659.1 727.9 12.0 13.2 3.8 5.1 835.9 21 n » 12.- m. 658.5 727.8 13.0 15.0 3.8 5.0 845.3 22 n J) 1.— p. m. 658.0 726.4 13.5 14.9 3.0 4.0 835.6 23 » n 2.-p.m. 657.4 725.6 9.5 15.0 4.5 6.0 829.2 24 » a 2.30p.m. Pan de Azúcar 657.3 9.0 4.5 828.7 Córdoba 735.5 15.0 6.0 25 n n 3.— p.m. 657.1 725.38 8.8 15.0 4.5 0.0 830.7 26 » » 3.30 p.m. 657.2 735.5 9.0 14.5 4.5 6.0 829.1 27 » » 5.— p.m. 657.1 726.0 8.0 12.8 5.1 6.6 833.7 28 » l> 6.— p.m. 657.5 726.42 7.0 10.8 5.3 6.8 827.8 2'J » n 8.30 p.m. 657.3 737.4 5.0 7.0 4.5 6.0 832.5 30 , 26 6.40 a.m. 656.35 734.97 9.0 3.0 4,0 5.3 815.3 SOBRE ALGUNAS ALGAS DE LA por 0. Nordstedt. Una parte de las algas luego mencionadas fué reunida por el Sr. Profesor J. Hieronymus durante los años 1878 — 1879; otra parte por el Dr. D. P. G. Lorentz y el Sr. D. G. Niederlein, que acompañaron al Brigadier-General Roca en su expedición al Rio Negro en 1879. Agradezco al Sr. Hieronymus su remisión. Todas fueron conservadas en agua que contenia ácido carbólico. Aunque algunas de estas algas estaban esté- riles, y por esta razón, indeterminables, sin embargo, las señalaré aquí para demostrar cuáles son los géneros representados. Las Diatomáceas de las colecciones aludidas han sido determinadas por el Sr. Profesor P. T. Cleve en Upsala, cuyo trabajo aparecerá dentro de poco. *) A. Algas coleccionadas por Jorge Hieronymus. a) e n el Rio Primero cerca de Córdoba. Scenedesrnus obtusus Meyen y acutus Meyen. Oedogonium sp., estéril. b)en las lagunas de las orillas del Rio Primero en la Chacra de la Merced cerca de Córdoba. Scenedesmus quadricauda (Turp.) Bréb. y acutus Meyen. *) Véase pág. igi de esta misma entrega. La Redacción. — 182 — Penium conspersum Wittr. (01 och. Gotl. Sotv. Alg. in Bih. t. Svensk. Vet. Akad. Handl. Bd. 1 n. 1 p. 66) b americanum Nordst. nov. var. Massse chlorophyllaceíB semicellularum binae laminibus longitudinalibus iit in P. interrupto et P. marga- rita ce o, non singuUie ut in P. Cylindro (et con- s p e r s o a. ?); membrana achroa. Crassit. 22 — 26 mmm; *) long. 60—130 mmm. — Forsan propria sit species. Merismopedmm ((¡laucum Nág.?). No he visto mas que unas pocas familias. c) e n 1 o s a 1 r e d e d o r e s de la Chacra de la Merced cerca de Córdoba. Scenedesmus acutus Meyen et /¡uadricauda (Turp.) Bréb. Coelastrum- sphaericum Nag. Oedogonium sp., gynandrósporo con oogonios todavía jóvenes y por lo tanto indeterminable. Spirogyra porticalís (MüUer) Clev. Diam. cellul. veget. 27 — 30 mmm. cell. fruct. 40 mmm.; crass. spor. 36 — 38 mmm. long. spor. 56—70 mmm. — Como las esporas no están maduras, la determinación no es absolutamente segura. Conferva boinbycina Ag. Coleochaete sp. (seg. J. Hieronymus; yo no lo he visto) Yaucheria geminala (Vauch.) Walz. forma racemosa 1. verticillata. Los cabillos de los oogonios, á veces en- corvados, acercan esta forma á la V. uncinata Kütz. d)Lago del Paseo en la ciudad de Cór- doba. Spirogyra quadrata (Hass.) P. Petit (Spirog. d. env. d. Paris p. 8 t. I. f. 13) forma pauUo tenuior. üiametr. ') Por el signo "mmm." espresamos los " micromilímetros". La Redacción. — 183 — cell. veget. 20—22 mmm., cell. íVuctif. 32—36 mmm.; crass. spor. (non matur.) 28—32 mmm., long. 50—80 mmm. Spirogyra long ata (Vauch.) Kütz; Petit 1. c. pag. 20, t. V., f. 4—5. Spirogyra orbicularis (Hass.) Kütz. ; Pet. forma fasciis chlorophyllaceis 8—10. Crass. cellul. 102—140 mmm. ; diam. spor. 110—134 mmm. Las esporas aun no están enteramente maduras. e) Laguna de Peitiado cerca de Córdoba. Sirogonium sticticum (Engl. Bot.) Kütz. forma cellu- lis paullo tenuioribus. Crass. cell. veget. 32—36 mmm., altitud. 2— 8-pIo longior; lat. spor. 48—50 mmm., long. spor. 60—76 mmm. Nostoa sp., muy pequeño. f) e n una acequia en el pueblo d e S o t o, Provincia de Córdoba. Closterium Lúnula (Müll.) Ehrenb., long. 320 mmm., lat. 72 mmm. Closterium acerosum (Schrank) Ehrenb., long. 540 mmm., lat. 40 mmm. Euastrum quadratuin Nordst. Cosmarmm granatum Bréb. lat. 22 mmm., long. 29 mmm., crass. 12,5 mmm. Cosmarium protractum (Nag.) Arch. lat. 54—56 mmm., long. 60 mmm., crass. 32 mmm., lat. isthm. 20 mmm., lat. apic. c. 16 mmm. Cosmafiu7n gemmiferu7n (Breb.) Forma granulis in tumore basali in series 3 horizontales dispositis, crenis lateralibus apicem versus majoribus (ut in C. Quasillo Lund.). Lat. 45—50 mmm., long. 58-65 mmm., crass. 27 mmm.; lat. isthm. 15—16 mmm., lat. apic. c. 22 mmm. — No he visto mas que algunos pocos ejemplares, y esta forma merece un estudio mas exacto. — 184 — Penium conspersum Wittr. b americanum Nordst. Cfr. supra. g)En un arroyo mas arriba de la Reduc- ción en la Sierra chica de Córdoba: Batrachospermum {Dülcnii var ?) Puiggariatvam Grun. in litt. cum. ex. Como el Señor D. A. Grunow tiene la intención de describir pronto esta forma propuesta según ejemplares recolectadas por el Señor Puiggari, la menciono aquí bajo este nombre. h) C e r c a de la Encrucijada, Sierra F a- malina, Provincia de la Pt i o j a: Vaucheria fJookeri Kütz. Diametr. fil. 46—86 mmm., lat. spor. 120 mmm. long. 150 — 165 mmm. Junto con ella se hallan ademas especies estériles de Spirogyra, Zyg^ioma y una Oscíllaria (diam. fil. 12 — 14 mmm.). i) en el arroyo cerca de los Potrerillos; Sierra F a m a t i n a. Especies estériles de Zygnema, Spirogyra y Vaucheria. j)En el arroyo de los Corrales al pié de la Sierra Fa malina: Especies estériles de Oedogonium, Spirogyra, Mesocar- pus con Chara foetida Ai. Br. (con frutos no maduros). Cosmarium pseudopyramidatum Lundell, forma mi- nor; lat. 22 mmm., long. 34 mmm., crass 13 mmm. Gloiotrichia natans (Hedw.) Thur. Vaginas non con- strictse. Diam. spor. sine vagin. 12—14 mmm. k) En los alrededores de la Cueva de Pé- rez, Sierra F a m a t i n a , Provincia de la R i o j a : Stigeocloniuin sp. (las celdidillas se encontraban des- prendidas una de otra). — 185 — 1) Cerca de las Cortaderas, mas arri- ba del Jagüel cerca del pié de la cuesta del Peñón, Cordillera de la R i o j a: Tetraspura lubrica (Roth) Ag. Conferva bombycina Ag. Especies estériles de Zygnema, Spirogyra y Vauc/ieria. m) A 1 pié del Peñón-, Cordillera de la R i o j a: Ulothrix sp. Sólo he "visto pocos ejemplares de esta especie. n)En una cañada de la Ciénega redonda en el Valle de V i n c h i n a; P r o v. de la R i o j a. Chara foetida Al. Br. forma longibracteata subi- nermis. Pediastrum Boryanum (Turp.) Menegh. » pertusum Kütz. b as perú m A. Braun. Closterium monüiferum (Bory) Ehrenb. diametr. 46 mmm., long. 250 mmm. Cosmarium pyramidatum Bréb. lat. 45—48 mmm. long. 64 mmm., crass. 80 mmm. ; lat. isthm. 14—16 mmm. Cosmarium granatum Bréb. lat. 20 mmm., long. 26 mmm., crass. 12 mmm. Cosmarium reniforme (Ralfs) Arch. forma granulis densioribus, lat. 51—56 mmm., long. 62—65 mmm.; crass. 28 mmm. Especies estériles de Oedogonium y de Spirogyra. Gomphosphaeria aponina Kütz. Lyngbya aestuarii (Jürg.) Liebm. diam. fil. cum vag. 20—22 mmm., sin. vag. 12,5—14,5 mmm. long. cell. diámetro 7-plo minor. o) En el Rio de Chilecito; Prov. de la Rioja. Oedogonium sp. estéril. - 186 — Stiyeoclomum gracile Kútz. forma. Cellulse infimse diámetro (9 mmm.) 1— 2-plo longioies, inferiores et superiores diámetro (7 — 8 mmm.) 5-plo longiores; rami aut ápice acumiiiati, sed non piiiferi, cellulis diámetro (6 mmm.) duplo longioribus, aut obtusi cellulis diámetro (9 mmm.) par. ve! dimidio iongioribus. p)En el Ojo de Agua del Saladillo; Sier- ra Velasco; Prov. déla Rioja. Especies estériles de Zijípiema y Oedogonium. q)Enun arroyito cercado la Cuesta del Peñón; Cordillera de la Rioja. Tolypothrix penicillata (Ag.V) Thuret b graciiis nov. var. Forma tenuior heterocystis 2 — 5 quadratis vel oblongis; crass. trichom. c. vag. 12—16 mmm., sine vag. 4—8 mmm.; crass. pseudoram. c. vag. 9 — 10 mmm, sin. vagin. 4—7 mmm., long. cell. 3 — 4 (6-8) mmm.; crass. heterocyst. 7—10 mmm., long. 9 — 18 mmm. — Fortasse propria sit species. B. illgas coleccionadas por P. G. Lorentz y G. !Niederlein. 1) En estanques cerca de Azul; Provincia de Buenos Aires. Zygnema sp. estéril. Nostoc commune Vaucli. OsciUaria sp. (indeterminable). 2) Arroyo de Olavarria; Provincia de Buenos Aires. Closterium sp, (sólo he visto un ejemplar), Spirogyra estéril. 3) En el agua salada del arroyo del For- tin Iniciativa. Spirogyra estéril. Zygnema estéril. — 187 — Enteromorpha piiifera Kütz. forma ramis paucis. 4) En una cañada cerca del Fortín La- valle. Enteromorpha piiifera Kütz. forma ramis capillaribus plurimis. 5) E n el K i o Sauce chico. Cladophora glornerata L. crass. fil. infer. 85 — 100 mmm., ram. primar. 70 mmm., ram. ordinis ultimi 50—60 mmm.; cell. diámetro 3—5- 6-plo longior. Forma ramis inferius interdum basi connatis ad Ciad, canaliou- larem accedens. Aplianochaete repens Al. Braun. Xenococcus sp. (Spliaenosiphon minimus Reinsch?) 6) L a g u n a s en las pampas entre Fortín Lavalle y Carhué. Especies estériles de Spirogyra y Zygncma. Closierium moniliferum (Bory) Ehrcnb. lat. 46 mmm., long. 320 mmm. BRONQUITIS ocasionada por SmOiNGTLUS filaría Dies. por GIL A. R. SMIT *) En los meses de Julio y Agosto del año próximo pasado, tuve ocasión de observar en la hacienda una bronquitis par- ticular. Esta enfermedad no es desconocida de los veteri- narios, y la razón por la que, no obstante eso, comunico mis observaciones sobre este caso, es la circunstancia especial que lo acompañaba. Generalmente, como es sabido, la enfermedad se presenta en taraza vacuna durante los veranos fríos y húmedos, ata- cando los individuos jóvenes y adultos, especialmente en paí- ses como Frisia (Paises Bajos), donde hay muchos prados pantanosos. Ese año, entretanto, el verano fué, por el contrario, muy seco y cáüdo, y el prado donde se encontraban las diez va- cas cuya historia mórbida relato aqui, es bastante seco y presenta un declive notable. Anamnesis. En Mayo fué cuando el estanciero compró tres vacas, aparentemente muy sanas, las cuales, introduci- das en el mencionado prado, permanecieron en él hasta fine.s de Juho. En el mismo prado vivian ya, desde la primavera, siete vacas, criadas por el mismo, que siempre habían estado *) El Dr. Smit fué nombrado por el Exmo. Gobierno Nacional para regentear la cá- tedra de Patología externa, Clínica quirúrgica y Medicina operatoria en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nací, de Córdoba. La Redacciotí, — Í89 — completamente sanas y en las que no se habia notado nin- gún síntoma de escrofulósis. Las tres semanas, pooi mas ó menos, que precedieron á aquella en que apareció la enfermedad citada, fueron m iiy socas y el tiempo fué excp.lento, á pesar de hahíU' sido un po(;o malo anteriormente. La enfermtulad so presentó á un mismo tiempo en lastres vacas compradas, y después sucesivam(>nte en las demás, de modo que pronto no hubo un solo individuo sano en todo el prado. Parece que son los tres individuos comprados los que han intro.lucido la enfermedad (en forma de hue/'os de los hel- mintos arriba citados) en los bronquios, y que ésta ha tenido un período de incubación de poco mas ó menos dos meses. También puedo ser que ios parásitos existieran ya en el prado, pero que Ins vacas nuevamente importadas han sido mas prontoatacadas que las otras, como sucede á menudo en animales inmigrantes, pues éstos están nr.is sujetos á las influencias mórbidas de un país que los propios hijos de este. Creo también, que aquí tenemos que reconocer un conta- gio, es decir, en los esputos, porque de otra manera seria imposible exphcar la causa de la enfermedad en todos los animales á la vez, mientras que quedaba intacto el ganado que pacía en los prados vecinos y se hallaba en condiciones menos sanitarias que el que nos ocupa. Los síntomas clínicos del primer estado son una tos aguda, y sibilante, con cortas intermitencias, y un estado de apuro; una respiración acelerada, con mucho movimiento de las costillas, no solamente por los músculos elevadores de las costillas ó escalenos, sino tam1)ien por los intercostales; posición baja del diafragma; el apetito y la defecación son normales todavía. En el segundo estado, se observan los siguientes síntomas auscúltatenos: ronquera sibilante, ó soplante y ruidosa. Algunas veces, el ruido vesicular y aún todo ruido respira- torio ha desaparecido en toda la extensión de los lóbulos Bol. Arail. IV. 13 — 190 — pulmonares, manifestándose recien mas tarde la tos expec- torante. La percusión no es dolorosa y el sonido perentorio es linfático. En el tercer estado, el apetito disminuye poco apoco. Los animales están muy inquietos y mueren pronto en el mas alto grado de dispnea. Autopsia. En los pulmones se presentaron un enfisema é hiperemias locales. Algunos de los bronquios mayores esta- ban completamente cerrados por masas de una sustancia mucosa, bastante espesa, y cantidades de helmintos vivos, enredados en forma de ovillos. En los bronquios mas finos se observaron individuos aislados de la misma especie de helmintos. No he podido examinar los otros órganos . Los helmintos pertenecían todos á la especie conocida en la ciencia bajo el nombre de Strongylus filaria Dies. Terapéutica. El veterinario que trataba estos animales me buscó para consultarme sobre la terapéutica, y le acon- sejé hacer un experimento con fuertes cantidades de ácido carbólico, dando 4 gramos por dia á cada animal. El reme- dio ha tenido algún éxito, de manera que en cinco individuos los síntomas desaparecieron en su mayor parte. Reconozco, sin embargo, que la terapéutica mas racional hubiese sido darles grandes dosis de clorato de amoníaco, pero el estanciero no nos permitió hacer la prueba con este medicamento, y como tuve que dejar esos lugares, no conoz- co el fin de hi historia. Sería bueno que otros, en casos análogos, se fijasen en esta particularidad. ÜTRECHT, Mayo de 1881. Gil A. R. SmíL üeteriiiinaciones de Diatomáceas de la República argentina por P. T. Cleve. El Ür. O. NoRDSTEDT me ha procurado materiales de Diatomáceas de la República Argentina que han sido re- cojidos por el profesor G. Hieronymus, el Dr. P. G. LoRENTz y el Sr. D. G. Niederlein. Los dos últimos señores hicieron colecciones en la Provincia de Buenos Aires y en Patagonia, acompañando al General Roca en la expedición militar al Rio Negro Lo demás del ma- terial mencionado procedía de los alrededores de la ciu- dad de Córdoba y de la Provincia de la Rioja, especial- mente de las Sierras Velasco^y Famatina y las Cordilleras al Poniente de la última; fué cosechado por los Srs. Hieronymus y Niederlein. Del examen de este material resultaron las siguientes formas : Amphora ovalis Kütz. Rioja. Cymhella cymbiformis Kütz. Rioja, Sierra Famatina, Córdoba. CymheUa (Cistiila var.) maculata Kütz. Córdoba. » affinis Kütz. Sierra de Velasco. » tiirgidula Grun. Rio Primero. EncyoHfima caespitosum Kütz. Córdoba, Soto etc. » turgiduin (Greg.) Grun. Sierra Famatina. Schizostauron (?) Andicolum Cl. N. Sp. Sierra de Velasco. Stainoneis Ueu/leri. Grun. Rioja. » Phoeiiicenteron Ehb. Sierra de Velasco, Cór- doba. — 192 — Staiironeis acata Sm. Soto. Provincia de Córdoba. » permlnuta Gruii. N. Sp. Arroyo de Olivera. Patagonia. » anccps Ehb. var. Sierra de Velasco. » (f/racílis var.V) Argentina Cl. Sierra de Velasco. Mastn;/k)ia Üaiiscl Tiiw. Sierra Famatina. Kio Sauce Chico; Prov. Buenos Aires. » {Daiisci var.?) eliiptica (C. Ag.) Grun. Cor- dillera de. la Rioja. Navícula Dactijlvs Ehb. Sierra Famatina. Sierra de Ve- lasco. )) majar Kütz. Sierrn Famatina. » vlridis Kütz var. Patagónica Cl. Los Potreri líos; Sierra Famatina. » Brchissoníi Kütz. Sierra Famatina. )) horealís (Ehb.) Kütz. Lugar no indicado. » gibha var. brcvistriata Grun. Sierra de Velasco. Sierra de L'i Rioja, Córdoba, Soto etc. » parva Ehb. Rioja. Sierra de Velasco. » Braunii Grun. Sierra de Velasco. » subcapitatata Greg. Sierra de Velasco. » peregrina Kütz. Rioja. Rio Sauce (.Ihico; Prov. de Buenos Aires. » grácil is (Kütz) Grun. Sierra Famatina. » radiosa Kütz. Rioja. » tenella Bréb. Rioja. » rosteUata Kütz. Soto, Prov. de Córdoba. )) rhgnehocephala Kütz. Sierra de Velasco. Cór- doba. )) crgpíocephala Kütz. Rioja. Córdoba. Sierra de Velasco. » Menisculus. Schum. Córdoba, Sierra de Velasco. » Angllca Ralfs. Rio Sauce Chico. Rioja, etc. » gregaria Donk. Córdoba. Las Cortaderas. (Cor- dillera de la Rioja). — 193 — ÍS avíenla Ctucícu I a Donk. Rioja. » Riojae Cl. N. Sp. Sierra Famatina. » piigmaea Kütz. Rioja. » elliptica Bréb. Sierra Famatina. Rio Sauce Chico. )) Kotschjana Griin. Arroyo de Olivera. » formosa Greg var. Rioja. » líuni/arlca Grun. Sierra de Velasco, Arroyo de Olivera. Rio Priinero. » sphaerophora Kütz. Arroyo de Olivera. Rioja. » cuspiílata Kütz. Córdoba. Rioja. Sierra de Ve- lasco. » ambigua Ehb. Arroyo de Olivera. Sierra Fa- matina. Córdoba, etc. )) íacuiiarum Grmi. (Striae 19 in 0,oi m. m. lugar no indicado. » dubia Greg. Arroyo de Olivera. » bisulcata Ldt. Sierra de Famatina. » Pupula Kütz. Sierra de Velasco. Diadcsmis confervacea Grun. Sierra de Velasco. Van Ileurckia vulgaris Thw. Rio Sauce Chico. Prov. de Buenos Aires. Ampliiplcura Lindlieimeri Grun. Rio Sauce Chico. Prov. de Buenos Aires. EJidosigma eximium Bréb. Sierra de Córdoba. Pleurosigma Brébissonü Grun. Rio Sauce Chico. Prov. de Buenos Aires. » aciiminatii nt (Kütz.) Grun. Sierra Chica de Córdoba. GoDiphonciua cunstrktu.ni Ehb. Córdoba. Sierra de Ve- lasco. n Augur Ehl). Rioja. » sübcJacatum Grun. ¿arroyo de Olivera. )) ci)iñi,iutatu¡n Grun. Chacra de la Merced, cerca de Córdoba. » a f fine Kütz. Sierra de Velasco. — 194 — Gomp/ioneraa gracUe Ehb. Córdoba. Sierra de Velasco. » angustatum Kütz. y var. producía Grun., en todas partes. )) parvvAum (Kütz.) Grun. Arroyo de Oli- vera. Sierra de Velasco. » olivaceum Ehb. Rio Sauce Chico. Prov. de Buenos Aires. Achnanthes brevipes C. Ag. Rioja. Córdoba. » in flato, Grun. Sierra de Velasco. » llungarica Grun. Rioja. Sierra de Velasco. Córdoba. » lanceolata (Bréb.) Grun. Sierra Fnmatina, etc. » microcephala Grun. El lugar de donde se tomó, no está indicado. » Biasolettiana Grun. El lugar de donde se tomó no está indicado. » exigua Grun. Rioja. Cocconeis Placentula Ehb. et var. linéala Ehh. en toilas partes común. Epithemia Zebra (Ehb.) Kütz. Rioja. » gibba (Ehb.) Kütz. Sierra Famatina, Rioja. Soto en la Prov. de Córdoba etc. » var. parallela Grun. Sierra Famatina. » gibberula Kütz. Rioja. Sierra Famatina. Terpsinoe música Ehb. el lugar de donde se tomó, no está indicado, Enuolia pracrupta var. bidens Grun. Lago del Pasco en Córdoba. Synedra Ulna Ehb. Arroyo de Olivera, var. longissima Sm. Fortin Lavalle. var. lanceolata Kütz. Rioja. var. vitrea Kütz. Rioja. var. dánica Kütz. Rioja. Synedra oxyrhynchus Kütz. Fortin Lavalle. » Acula Kütz. Arroyo de Olivera. Córdoba, etc. — 195 — Synedra affinis Kütz. Fortín Lavalle. Staurosira intermedia Grun. Rioja. » Harrisonii (Sm.) Grun. Rioja. » (bidens Heib. var.'?) Pataíjonioa Cl. N. Sp. Los Potrerillos. Sierra Faniatina. DenticiUa tenuis Kütz. var. Hantzschia amphioxys Grun. Rioja, Soto en la Prov. de Córdoba, etc. var. dongata Grun. Rioja. Nitzchia Tnjblionella Grun. Sierra de Velasco, Rioja. var. Victoriae Grun. Soto, Sierra de Velasco. Mtzchia líungarica Grun. Sierra de Velasco etc. commun en todas partes. - » apiculata (Greg.) Grun. Córdoba. Sierra de Ve- lasco. Rioja. » calida Grun. Sierra de Velasco. » dubia Sm. Sierra Faniatina. » stagnarum Rabh. Rioja. » bilobata Sm. Rioja. » Üenlicula Grun. Córdoba. Rioja. Sierra de Ve- lasco, etc., en todas partes común. » Sigma Sm. Córdoba. » linear is Sm. Sierra Famatina. Córdoba. Soto, etc., común en todas partes. » Heufleriana Grun. Soto, Prov. de Córdoba. » paleacea Grun. Córdoba. » amphibia Gnm. Córdoba,. Sierra de Velasco, etc. común en todas partes. » intermedia Hantzsch. Arroyo de Olivera. » Palea Kütz. Córdoba. » Kützingiana Hilse. Rioja. Surirella splendida Elib. Fortin Lavalle. » laevigata Ehb.? (A. Schniidt, Atl. Pl. XXIV fig. 25) Rio Sauce Chico, i^rov. de Buenos Aires. « awjKSta Kütz. Córdoba, etc. en todas partes. - 196 - Surirella linearis Sm. Sierra Famatina. Cyclotella Meneghiniana Kütz. Arroyo de Olivera. Rioja, etc. Mdosira varia as C. Ag. Córdoba. Fostin Lavalle. Xuevas especies ó varie«laíles. Navicula Riojae Cl. Elliptica, apicibus late rotundatis; striis (subtilissimae punctatis?) subradiantibus, mediis distinctioribus et'cum brevioribus alternantibus, lineam inediam non attingen- tibus. Saviculae Bacillu (Ehb.) Grun. aífinis. Longit. 0,07 nim. Lat. 0,024 mm. Stiicie 19 in 0,01 nim., in api- cibus 20 in 0,01 mm. Loe. Sierra F amati n a, R ep. Arg. (ic. inOever- sigt ai" K. Sv. Vetensk. Akad. Forhandlingar 1881, N? 10, t. XVr, flg. 2). .Navícula viridis var. ? Patagónica Cl. Linearis, apicibus subcuneatis, striis subparallelis, in apicibus radiantibus 13 in 0,01 mm., circa nodulum centralem desinentibus, lineam mediam non attingentibus. Longit. 0,058 mm. Lat. 0,014 nnn.— ;Ic. 1. c. fig. 3). Loe. S i e r r a F a m a t i n a. Stauroneis perminuta Grun. (in litt. cura icone). Elliptica apicibus rotundatis vel obtusis, striis radian- tibus 23 in 0,01 mm. Área transversa utrinque ad mar- ginem extensa. Longit. 0,025 mm. Lat. 0,0U8 mm. (Ic. 1. c. fig. 9). Loe. Arroyo de Olivera; P a t a g o n i a, (África merid. Baakens River ex Grunow). Stauroneis {gracilis var?) Argentina Cl. Lanceolata, apicibus capitatis, striis radiantibus, 16 in 0,01 mm. (subtilissime punctatis?), área trr.nsversa — 197 — valvarum niarginem non attingente. Long. 0,065 nim. Lat. 0,013 mm. (Ic. 1. c. fig. 4). Loe. Sierra de Ve la se o, R e p. Argent. Stauroiieís anceps Elib. var? Lanceolata. apicibus attenuatis, striis delicatissimis. punctis distinctis compositis, 24 in 0,01 nnn. ; área trans- versa valvarum niarginem attingente. Long. 0,065 mni, Lat. 0,018 mm. (Ic. 1. c. fig. 5). Loe. Sierra de Ve lasco, Rep. Argent. Sclhizostauroii (V) amlicoíum Cl, Lineare, elongatum, convexum, nodulis terminalibus iu directiones oppositas vergentibus, striis 22 in 0,01 mm. subparallelis. Long. 0,0o6 mm. Lat, 0,007 mm. (Ic. I, c. ñg. 8). Loe. Sierra de Velas eo, Rep. Argent. Staurosira (bidens Heib. var?) Patagónica Cl. Linearis, medio túmida, apicibus apiculatis, striis IM in 0,01 mm., in medio indistinctis. Long. 0,05 mm. Lat, 0,004 mm. in medio 0,006 mm. (Ic. 1. c. f. 13). Loe. S i e r r a F a m a t i n a : Los P o t r e r i 1 1 o s ; R e p. A r g. _l_.yS©.^-l- Q^^¡ ^.(^% boletín DE XjA EMIA ICIAL ub: CIENCIAS EN CÓRDOBA (REPÚBLICA ARGENTINA.) TOMO IV. liNTKüGA III. v IV. BUENOS AIRES Litografía, Imprenta y Encuaderaaciou de Guillermu K.raít Calle Reconquista 92 1882. n rf^^ boletín X)E IjA ICADEMIA NACIONAL DE CIENCIAS EN CÓRDOBA (REPÚBLICA ARGENTINA.) TOMO IV. ENTRECA 111. y IV. BUENOS AIRES Litografía, Imprenta y Encuademación de Guillermo Kraft Calle Reconquista 92 188^2. CONTENIDO DE LA 3^ Y 4=* ENTREGA DEL TOMO IV. PARTE CIENTÍFICA. Página J. HlERONYMUS, Plantee diaphoriccz floree argentina ó revista sistemática de las plantas mediciiKiles, alimenticias ó de alguna otra utilidad y de las venenosas, que son indígenas de la República Argentina ó que, originarias de otros países se cultivan ó se crian espontáneamente en ella. . . 199 n anta diapliorics flora arg-entiiia Revista sistemática de las plantas medicinales, ali- menticias ó de alo-una otra utilidad v de las veneno- sas, que son indígenas de la República Argentina ó que, originarias de otros países se cultivan ó se crian espontáneamente en ella. ]VIeiTioria II. dedicada respetuosamente al Ex"!° Señor Presidente de la República Argentina, Brigadier Cieueral Don Julio A. Roca, Proííclor de la Academia Nacional de Ciencias en Córdoba, |ic)r J. Hiero iiy mus. La siguiente obrita no tiene la, pretensión de ser un traljajo (3riyinal, pues no es mas qne una simple compi- lación de datos y iidtit'ins (jue he reeojilo: los debo tanto á las comunicaciones de ios habitantes del país y los he coleccionado en los llanos y las sierras durnnte los vanos viajes que he hecho en la República Argentina, cuanto los he sacado de libros antiguos ó modernos publicados en este país y en el extranjero, aprovechando los momentos de ocio en que no podia dedicar mis es- íuer/os á trabajos originales de mas mérito cientílico. Tampoco abrigo l;i. intención de presentar aquí un examen agotado de todas las plantas que tieniui alguno de los caracteres indicados en el título, ni estiria en mi poder hacerlo, en razón de (pie la República Argentina, especialmente los territorios del Norte pertenecientes al Gran Chaco, la provincia de Corrientes, las Misiones, etc., Bol. Acad. IV. ri — 2U0 — territorios (]\ig ofrecerán auii un número mayor y consi- derable de plantas diafóricas desconocidas, están relativa- mente muy poco explorados liasta la fecha, y su vegeta- ción desconocida en su mayor parte. He resuelto, además, iimitarme únicamente á enumerar las especies cuyo nombre científico es conocido con perfecta segundad y sobre cuya determinación recta no puede abrigarse duda. No, quería en esta obra, mezclar noticias inciertas con datos probados. Asi es que en el siguiente catálogo faltan muchas plantas útiles, cuya determinación científica ha sido imposible fijar hasta ahora, en virtud de que no he visto todavía ningún ejem- plar de ellas ó solo he tenido en mi poder ejemplares rudimentarios que carecían de flores y de frutas, plantas que son á veces conocidas de los habitantes del país bajo nombres vulgares, v. gr. — para citar algunos ejem- plos—no he añadido á mi lista algunos árboles de buena madera que son el quina-(¡iiina {Mijwxyíuin spec. ?) árbol alto que es indígeno en las provincias de Tucuman, Salta, Jujuy, Oran, etc., el llamado roble, igualmente de una altura considerable, que se cria en los teri'itorios de Oran (pertenece quizás á la familia de las Leguminosas) ei arca de Tucuman, el latané de Jujuy y Oran, etc. Pues, solo he enumerado en mi catálogo los vegetales que son representados en el herbario del Museo Botánico de la Universidad Nacional ó los sobre cuya existencia espontánea ó cultura tengo noticias fidedignas. Aunque la obrita tiene así el defecto de no tener su tema agotado, espero que ella llenará sus designios. Estos son diversos: Primero, espero que este trabajito contribuirá en algo á hacer conocer en los países extranjeros los numerosos productos que deriven del reino vegetal de la Ptepública Argentina y de los que puede el hombre sacar provecho, y que, de esta manera, servirá mi obrita, aunque quizas — '201 — indirectamente^ para atraer la corriente de la inmigración, especialmente la de agricultores que tanta falta hace aun en la ma3'0r parte de las comarcas de la República Argentina. Por lo tanto, tengo la convicción de que esta obrita podra ser de algún provecho para el médico instruido que posee los conocimientos de botánica siste- mática cuya importancia es reconocida en todos los pueblos civilizados para el estudio de la medicina: sea que encontrándose lejos de un centro de pubiacion y no pudiendo aprovecharse de los medicamentos existentes como oficinales en las boticas, podrá elegir, por medio de mi obra, remedios sucedájieos presentados por la ñora del pais, remedios que, á veces, son mas eficaces que los oficinales, por la razón de (¡ue pueden emplearse frescos ó recién recolectados, mientras que estos, encon- trándose á veces conservados en las boticas y droguerías desde mucho tiempo, han perdido ya sus principios y virtudes; sea que el estudio de mi opúsculo le conduzca á hacer ensayos lisioiógicüs y terapéuticos con una ú otra de las drogas (pie indico, y que llegue á descubrir (j[uizas, de este modo, algún remedio nuevo importante (pie merezci ser agregado á los de las íáiiuacopéas. Mi publicación tiene todavía un designio especial mas, porque espero que contribuirá a estimular ios habitantes eruditos de la República á recoger otrus datos sobre plantas de la ñora ¿irgentina, y me pernhto espet'ialmente invitar á los señores profesores de historia natural de los Colegios Nacionales y demás institutos de carácter semejante, á prestarme su eficaz ayuda, recogiendo y preparando para su conservación en el herbario d(! la Universidad Nacional, plantas de la flora argentina y juntando noticias sobre el uso de ellas, su cultura y otras ([ue pudieran proporcionarse con el fin de que pueda, lo mas pronto posible,, darse un suplemento á nú catálogo y ([UQ, con la mayor brevedad posible, quede — 202 - completa la exploración del país en el sentido aludido. Lo dicho se refiere, por lo pronto, ó á plantas que tienen un nombre vulgar en el pais y que no he incluido en este catálogo por falta de la determinación cientiñca, ó á las plantas enumeradas en él con nombre científico y popular, pero á las que no he podido agregar datos sobre su uso, etc., por carecer de ellos. No he excluido estos últimos vegetales suponiendo que el mayor número de plantas que poseen un nombre vulgar, deben también tener alguna apficacion útil ó ser de alguna importancia por una causa aun desconocida. Siendo justo indicar las fuentes en las que he tomado los datos ya indicados, voy á mencionar los títulos de algunas obras que han sido de suma utilidad para llevar á cabo este trabajo; son las siguientes: Mar ti US et Eichler, flora Brasilensis fase. 1—62. A. de S a i n t - H i I a i r e , Plantes usuelles des Brési- liens (1827). A. de S ain t - H i 1 ai r e, Histoire des plantes les plus reiuarquables du Brésil et du Paraguay (18'3-1). D. A. R o s e n th a 1 , Synopsis plantarum diaphorica- rum (1862). R. A. Philippi, Elementos de Botánica para el uso de los estudiantes de Medicina y Farmacia en Chile (1869). A. Murillo, Botánica y Materia médica chilensis (Anales de la Universidad de Chile t. XVIII (1861). V. A. Espejo, Una excursión por la Sierra de Cór- doba (1870). G. H i e r o n y m u s, Observaciones sobre la vegetación de la provincia de Tucuman (Boletín de la Academia Nacional t. I. 1^71). T h. H u s e m a n n , Handbuch der gesammten Arznei- mittellehre (1875). P. G. Lorentz, La Vegetación del Nordeste de la Provincia de Entre-Rios (1878). — 203 — Domingo P a r o d i. Ensayo de Botánica médica Ar- gentina comparada. Tesis para optar al grado de doctor en farmacia (Buenos Aires 1881). F. Schickendantz, Catálogo razonado de las plan- tas medicinales de Catamarca (Anales del Círculo Mé- dico Argent. t. V. 1881). Boletín de la Exposición Nacional en C ó r d o b a (1869). Exposición de 1876 en P h i 1 a d e 1 p h í a : Boletín. Exposición de 1878 en París: Boletín mens. del De- partamento Nac. Argent. de Agricultura. Tengo que añadir algunas palabras sobre estas últimas publicaciones. Estos diversos boletines de las exposicio- nes citadas contienen sin duda datos de mucha impor- tancia sobre plantas útiles, especialmente sobre las sil- vestres é indígenas del país, pero, sin embargo, me han sido relativamente de muy poco provecho, por encontrarse casi siempre las plantas designadas en ellos solamente con su nombre vulgar*). Sobre un número considerable de estas plantas no podia abrigarse duda, después de haber sido do ellas coleccionadas en los varios viajes de exploración hechos por Lorentz, Schickendantz, por mí y otros botá- nicos mas, y de haberse reunido, sobre ellas, datos idénticos por los señores mencionados. Muchas otras quedaban dudosas para mi, no teniendo á la vista los ejemplares remitidos á las exposiciones y no pudiendo disponer de ellos. Esto se exjilicará fácilmente, sí se toma en consi- deración que se vé á menudo que una misma planta tiene, según las comarcas, diversos nombres vulgares y que, al contrario, se designa con el mismo nombre vulgar, ') El Bol. mens. (del Depart. de Agricultura) de la Exp. de París (y por parte también el de la de Philadelphia) hace, en este sentido, una excepción: en él, entre otros, se hallan impresas las etiquetas de una colección de plantas de la flora de Córdoba, que el autor de esta obrita habia reunido y que fué premiada en la Exposición de Paris con un diploma equivalente á una medalla de plata. En esta lista, como en otras á las que el Dr. Lorentz habia añadido los nombres científicos, están estos casi generalmente corrompidos por errores tipográficos. -^ 204 — en diversas comarcas, á plantas muy distintas , pertene- cientes, á veces, á faniilia.s que solo tienen afinidades le- janas, y se ha dado este nombre únicamente, quizas, por haber entre estas plantas alguna semejanza sui^erficial ó por empleárselas á. usos semejantes. Hibria sido, quizas, mas á propósito para los designios de mi opúsculo agregar las descripciones exactas á los nombres de las plantas y á las noticias dadas sobre ellas. Sin embargo, no lo he hecho por que, con esto, mi obrita habria perdido su carácter preliminar, ostentando enton- ces la pretensión de un tratado sobre la materia aludida y entonces hubiese, por lo tanto, dejado de ser adecuado para figurar en el Boletin de nuestra Academia, Tampoco trato en mi opúsculo de las propiedades de las familias de vegetales en general y me he limitado á dar las no- ticias , sobre cada especie , tales como me han sido referidas ó las he encontrado en los autores, y general- mente sin crítica, algvma, dejando esta última tarea á los médicos ó á las personas de mas competencia. x\un no ha, llegado el tiempo de poder presentar al público interesado en la materia una obra perfecta, por no hallarse todavía bastante explorada la vegetación de la República, y mi intención es que quede la presente como preparatoria y precursora de otra futura publicación mas extensa y completa. Para, en cierto modo, compen- sar la falta de de-;cripciones, he citado con los nombres científicos los pasajes de libros en que fueron propuestas las plantas y en los que primeramente han sido descritas, como también, á menudo, los de otras obras en que se han dado á luz correcciones y suplementos de la diagnosis original ó imágenes de las plantas. El botánico sabrá también encontrar las descripciones de la mayor cantidad de las plantas mencionadas en libros especiales, como Prodromus systematis naturalis regni vegetabilis por De Can do lie; Pvepertorium Botanices systematicLe por G. — 205 - G. W a 1 p e r s y Anales Botanices systematicne por G. G. W a 1 p e r s y C . M ü 1 1 e r, obras sumamente conocidas, por lo (|iie he juzgado superfino citarlas al tratar de la mayor parte de las especies de que hago mención en mi catálogo. Para su instrucción recomendaré al lector argentino la obra ya mencionada de R. A. P h i 1 i p p i, en la que se hallan descritas, en español, la mayor parte de las plan- tas útiles cultivadas en la Pvepúbhca Argentina, como también muchas silvestres y espontáneas que crecen en sus territorios. El lego en la materia podrá fácilmente hacer un estudio especial de los términos técnicos usados en nuestro catálogo, por medio del citado libro. Las descripciones de muchas otras especies de la flora Argentina, especialmente de las descubiertas en el último decenio, se encuentran en las siguientes publicaciones: A. Grisebach, Plantas Lorentzianie, (Gottingen 1874); A. G r i s e b a c h , Symbohe ad ñoram argentinam, (Got- tingen 18/9), ó en algún artículo botánico publicado en el Boletín de nuestra Academia. Nadie esperará encontrar en mí opúsculo noticias completas sobre las plantas cultivadas y tampoco tengo intención de presentar aquí al lector un libro de en- señanza sobre ellas. Consideraba antes, que dichas no- ticias harían pesada y molesta la lectura de mi obrita y que era impropia la reunión y mezcla de un número considerable de noticias nuevas y desconocidas en la ciencia sobre plantas silvestres indígenas en la Repú- blica, con otras tantas ya publicadas muchas veces, sobre plantas de cultura bien conocidas desde mucho tiempo é introducid;) s en ella por el hombre; no ob- stante, me resolví á no omitir aquí estas, primero porque tengo la convicción (]ue al extranjero que tiene interés de estudiar la vegetación de este país, le será agradable encontrar datos sobre las diversas plantas — 206 ~ ([lie se cultivan en él, y en qué provincias su cultura ha progresado mas hasta la fecha; segundo, que al hijo del país le presentarán también mterés, algunas de las noti- cias sobre el uso etc. de ellas, como también el conocer adHiuás el nombi'e científico de plantas (^ue generalmente solo le son conocidas bajo los nombres vulgares, á veces tan vagos y distintos en diversos parajes. Con esto concluyo el proemio de mi opúsculo para entrar inmediatamente en materia. s ABREVIACIONES USADAS rasterisco) añadiilo al noiiihrc cienlíflco si|j;nitica que la plaina no es de comerse en ensalada. * Capsella hursa pastoris (Moench, meth. 271). N. V. bolsita; bolsa de pastor; pan y quesillo. Yerba anual y maleza común en terrenos cultivados, introducida de Europa. Tiene virtudes astrinjentes, desecantes y vulnerarias. Senebieria pinnatifida (DC. mem. soc. hist. nat. par. ann. 7, p. 144, t. 9); — syn. iepidivm didymirm (L. mant. 92). N. V. qiiinipi ó qulinpe. Yerba común en casi toda la 11. A. (Aui. cal., Chile, ürug.). En la R. A. se usa la infusión de la yerba y raíz en el chucho ó fiebre intermitente, y la decocción en lavativa para la irritación de almorranas-, se pretende además que ~ 223 — mascarla es un buen antídoto contra el escorbuto y las en- fermedades de la dentadura y que, frotnndo las encías con la yerba fresca, se consolidan los dientes flojos. Se sirven de ella hasta para curar la gangrena y el cáncer, despue-^ de triturada la planta verde, le extraen el zumo y, mezclado con sal, lo aplican al punto en donde existe alguna de dichas enfermedades. — La yerba hace una buena ensalada. Lepidium pubescens (Desv. journ. bot. 3, p. 165 et 180). N. V. indiana. Yerba común en todn la R. A. Tiene virtudes diuréticas y antiescorluiticas. Lepidium marginaturn (Gr. Pl. Lor. n. 21). N. V. yuyo de resfrio. Yerba de las sierras altas de R. Ct. etc. La infusión es usada, como té, para el resfrio, y la planta tiene propiedades diin^éticns y diaforéticas. * Raphomis sativi/s (L. sp. 935). Planta originaria de China, cultivada desde mucho tiempo. Las variedades que se encuentran en la R. A. son: a. radícula (DC. syst. 2, p. 663. Prod. I, p. 228). N. V. rahanito, con raíces pequeñas, carnosas, de forma redonda ó alargada y de color blanco, rosa ó vio- laceo-morada. b. niger (DC. syst. 2, p. 663. Prod. I, p. 228) n. v. rábano negro, con raices mayores de color negro, de consistencia carnosa, dura y de forma globosa ó alargada. c. griseus (DC. Prod. I, p. 228). N. v. rábano gris; con raíz de color gris. d. albus (DC. Prod. I, p. 228).' N. v. rábano blanco; con raices mayores que las de var. a, de color blanco y cuya consistencia es mas dura. Las raices comidas crudas con sal promueven la diges- tión, son antiescorbúticas, flemagogas y diuréticas y se usan exteriormeute como rubefaciente. Las semillas con- tienen muclio aceite y en China se cultiva una variedad oleífera (/?. Chinensis Mili. dict. n. 5) para extraerla. Capparldeae. Cleome gigantea (L. mnnt. 430; Eichl. in Fl. bras. 13, 1. fase. 39. p. 248). O., yerba de las selvas tropicales. (Am. mer.). Las hojas fresen s se usan trituradas como cataplasmas cáusticas, en otras partes de la América del Sud. Cleome trachycarpa (Kl. ap. Eichler, Fl. bras. 13, 1, p. 248). E. Cleome cordobensis (Eichl. Pl. Lor. n. 23). N. V. orozú. C. Los campesinos usan la infusión teiforme de esta yerba como pectoral. Cleome flexuosa (Gr. Pl. Lor. n. 24). C. S. Sgo. Todas las especies mencionadas de Cleome tienen pro- piedades cáusticas mas ó menos pronunciadas. Capparis Tweediana (Eichl. in Fl. bras. 13, 1, fase. 39, p. 248). N. V. meloncillo. E. Corr. Sgo. O. Ch. (Bolivia, Brasil). Arbusto de 3 á 4 metros de altura ó árbol pequeño. Las hojas son cáusticas ; cuando son machacadas y aplicadas en epítemas, son calmantes y madurativas. En baños y fomentos como sedativas en las enfermedades nerviosas, y en el histerismo (seg. Parodi, Ens. de Bot. med. Arg. p. 24). Además, dicen que su decocción se emplea contra la disenteria. — 234 — Capparis retusa (Gr. Symb. n. 57). S. J., árbol pequeño de 3 á 5 metros de altuni. Capparis speciosa (Gr. Symb. n. 5S). N. V. naranjillo; árbol ó arbusto de o á 5 metros de altura. Sgo. S. O. Ch. Capparis pruinosa (Gr. Symb. n. 59). N. V. naranjillo. Ct. S. J.; árbol ó arbusto de poca altura. El cocimiento de la corteza y de las hojas se emplea (seg. Parodi. 1. c, p. 93) para baños contra el histerismo y las enfermedades de índole nerviosa. Aianiisquca emarginata (Miers. transact. Litm. soc. XXI, p. 1.; trav. II, p. 529). N. V. altamisque, mata negra (P.). Arbusto común, de generalmente 2 á 3 metros, á veces hasta 5 metros de altiu-a, en muchos parajes de los llanos de P. BA. SF. C. SL. M. SJ. U. Ct. Sgo. T. De las hojas cáusticas se hace uso para destruir los gusanos en las heridas de los animales ; los gajos se usan para baños en casos de ataques apopléticos y también contra los dolores de huesos; su infusión sirve para curar la clorosis de las niñas. Resedaceae. * Reseda odorata (L. sp. 646). N. V. reseda. Yerba originaria de Ejipto y otras partes del África se- tentrional, se cultiva en los jardines de la R. A. Sus flores olorosas son muy buscasdas por las abejas y se usan en Europa para la fabricación de perfumes. Violarieae. Anchietea salutaris (St. Hil. Pl. rém. du Brésil 291; Pl. us. t. 19). - 225 — E. Ch. O. Corr. (Bras. Parag.); enredader;i leñosa . La raíz (nidij- Atwhietcac) es un excelente emético y purgante, usado especialmente en enfermedades cutáneas. La han empleado también con buen resultado en la tos violenta. Exteriormente se hace aso de ella en fomenta- ci ojies ó cataplasmas para heridas. Contiene anquietina. * Viola odorata (L. sp. 1324). N. V. violeta común. Es originnria de la Europa central ; es cultivnda en los jardines, quintas etc. y se ha puesto espontánea en al- gunas regiones de las sierras v. gr., Sierra Chica de Córdoba. De las flores se hace un jarabe {syrupus violarum) que se usa contra la tos y en enfermedndes de los pár- vulos. Las raices, rizomas, hojas y semillas han sido oficinales y empleadas como litontrípticas, purgantes y eméticas, pero ya no son usadas. Contienen (especial- mente los rizomas) ciolina, sustancia acre semejante á la emctina. * Viola tricolor (L. sp. lo26). N. V. trínUaria, pensamiento. Planta anual originaria de Europa, cultivada en la R. A. y á veces espontánea en las sementeras. Además, se cultivan en los jardines variedades de esta planta é híbridas producidas por la cruza con V . altaica y otras especies. La yerba {herha Jaceae) es un remedio contra la costa láctea de los párvulos, es diurética, diaforética y emética y purgante en dosis grandes. Viola Flos Mariae (Hieron. Sert. Sanj. iii Bol. Ac. Nac. Arg. de Cieñe. IV, p. R, n. 10). N. V. bailabuen, escarapelo. SJ. (cordillera). No conozco el uso que se hace de esta yerba, pero creo que ella tendrá también propiedades emético-pur- gantes. Jonidium glutinosum (Vent. Malm. n. 27 in adnot.)- E. C. Ct. T. Sgo. S. (Bras. mer., ürug., Chile, Bo- livia, etc.) Jonidium álbum (St. Hil. Pl. rém. Brés. 303, t. 37 B). N. V. maitencillo. E. Corr. (Bras. mer., Parag., Urug.). Se puede hacer uso de estas yerbas como de las Ipe- cacuanhas blancas leñosas: J. Jpecacuanha (Vent.) y /. parviflorum (Vent.) como emético-purgantes. Contienen como estas emetina. Baños preparados con la decocción de las plantas se usan en reumatismos y neuralgias. También de las otras especies del mismo género que se hallan en la R. A., se puede quizás hacer los mismos usos medicinales ; son : J. Lorentzianum (Eichl. Pl. Lor. n. 26; Symb. n. 71); syn; Acentra sen ata (Phil. sert. mend. in An. Un. Chil. 35, p. 161. [1870] ex. sp. auth!). M. C. SL. Ct. T. S.; y J. Hieronymi (Gr. Symb. n. 73). S. T. Blxineae. Bixa Orellana (L. sp. 730). N. V. achiote, achote, urucú (en otras partes de Sud- Am. arnotto, rucu ó rucou). Planta originaria de la Am. cal., cultivada en O. Ch. Corr. La masa pulposa que envuelve las semillas es de un color encamado-naranjado y tiene olor á violeta, es un tónico-purgante y en sus efectos semejante al ruibarbo. Se ha hecho uso de ella y de su infusión en las fiebres, almorranas, diarreas, disenterias, cálculo de la vejiga, etc. - 227 — La semilla de gusto amargo-aromático se ha recetado como remedio corroborante del corazón y del estómago. El color {térra Orleana) que contiene la pulpa mencio- nada se usa para teñir la lana y la seda (de color naran- jado-subido). Los indios (Matacos y Chiriguanos) en los días de fiestas se tiñen el cuerpo con este color; en Bo- üvia es también empleado para teñir el chocolate, y en Inglaterra el queso. Con las hebras de la corteza pueden fabricarse cuerdas, sogas, etc. Azara salicífolia (Gr. Symb. n. 63). N. V. duraznillo. Árbol pequeño de 3 á 5 metros de altura, en las sierras de Ct. S., etc. Tiene madera dura. Xylúsnia nitidum (As. Gr. in Gr. Fl. Brit. W. Ind. p. 21). N. V. ira poitd (traducción del guaraní: madera colorada.) Corr. E. (Am. cal.). Árbol ó arbusto de 4 á 6 metros de altura y con madera de calidad regular para leña y carbón. Xylowia pubescens (Gr. Symb. n. 65). T. (sierra). Árbol mediano, cuya madera es de buena clase. Polygaleae. Monnina pterocarpa (Ruiz et Pavón. Fl. Per. syst. I, p. 174). Ct. (Perú, Chile). La raíz contiene monninina. En el Perú se hace uso de la corteza de la raíz contra la disenteria y las enfer- medades del estómago. Es muy verosímil que la raíz de las otras especies que se encuentran en la R. A. pueda emplearse del mismo modo; son: - 228 — Monnina emarginata (St. Hil. Fl. Bras. mérid. II, 63); E. (Bras. mor.); Monnina dictijocarpa (Gr. Symb. n. 76);* P. O. R. Ct. (sierras); y Monnina angustí folia (DC. Prod. I, 340, n. 29); Ct. T. (sierra). (Perú, Bolivia). iliialania coLletioides (Phil. An. Un. (JhiL. (1862) v. 31, p. 390; Liiinaea 33, p. 18\ N. V. quilín g. M. SJ. U. Ct.; arbusto de 1 á 2 metros de altura. Se usan los gajos molidos y puestos en agua para la- varse la cabeza; hirviendo con agua el palo molido se obtiene un líquido que sirve en lugar de jubón para lavar lana. Esta propiedad es debida, según Schickendantz, á la presencia de la glucósida saponina que ha recibido una aplicación terapéutica en casos de hemorragias del útero. ilualania 'micro phglla (Hieren.); syn. Brederneycra micr. (Hieren, in Doring, Lorentz et Niederl. Inf. ofic. de com. cient. p, 182) et Acanthncladus inicrophgllus (Gr. Syml). n. P8.); an Polggala, spinescens- (Gilí, in Hook. Bot. Mise. III, p. 146)? N. V. (¡uUlag. P. M. SJ. R. Ct. (sierra baja). La usan de la misma manera que la anterior. Car j ophylleae. Cerastium arvense (L. sp. 628). Sierras de la R. A., v. gr. Sierra Achala, Cordillera de SJ. R.; P. Yerba cosmopoUta. Las ñores {¡lores Auriculae rnuris albae s. HoLostei cargophgllí) han sido oficinales y se han usado del mismo modo que la Stellaria media (Vill.). — 239 -- * StelLaria rneJia (Vill. delph. 3, 615); syu. Alsine me- dia (L. sp. 3S9). Yerba introducida de Europa, común en terrenos cul- tivados de muchos parajes de la R. A. La planta entera {hcrba Alsines v. mor sus gallinaé) ha sido medicinal, tomada interiormente en infusión teiforme como refrescante contra el vomito de sangre, almorranas, inflamaciones del cutis; exteriormente, en inflamaciones de los ojos, estagnación de la leche y como remedio para las heridas. En Suiza se la pone como nervina en baños calientes para párvulos. Portulaceae. PortuLaca pilosa (L. sp. 639). N. V. fique. C. Ct. SJ. R. T. (Am. mer.); en tentónos salados. Se usa la yerba amarga en infusión teiforme contra in- digestiones, menostásis y como diurético. Portulaca olerácea (L. sp. 638). N. V. verdolaga^ fique. Yerba común en toda Ja R. A. Ha sido medicinal y se ha empleado su infusión teiforme como bebida á pasto en enfermedades de la vejiga, de los ríñones y del higado, el escorbuto, vómito de sangre, cólera, etc., exteriormente, en cataplasmas, sirve contra las que- maduras é inflamaciones de los ojos. Las hojas y brotes nuevos se comen con vinagre como ensalada, sea crudos ó cocidos. Portulaca mucronata (Lk. enum. hort. ber. 2, p. 2). N. V. verdolaga. C. (Am. mer.). Tiene las mismas propiedades y aplicaciones que la especie anterior. Grahaniia bracteata (Gilí, in Hook. Bot. Mise. III. p. 332, n. 493). — 230 - N. V. vinaf/rillo. Arbusto bajo de apenas un metro de altura en las salinas de C. SL. M. SJ. R. Ct. y Sgo.. cuyo uso ignoro. Talinum patens (Willd. sp. 2, p. 863 var. a). C. Ct. T. (Am. cal.). Talinum triangulare (Willd. spec. 2, p. 862). T. S. J. O. Corr. (Am. cal.). N. V, de las dos especies carne gorda. Usan estas yerbas para ponerlas en el puchero como legumbre; son buenas hortalizas. Tienen además virtudes refrigerantes y antiescorbúticas. Hypericlnea. Hypericum connatum (Lam. dict. 4, p. 16S). N. V. oreja del gato. BA. E. C. R. T. Ct. (Uruguay, Bras. mer.). Tiene calidades tónicas, estimulantes, astringentes, cor- roborantes y vulnerarias, y las sumidades floridas y gra- nadas se usan en decocción en los casos de enfermedades de la garganta, sirviéndose de ella el enfermo para gar- garizarse. Ternstroeiniacea. Ternstroemia ciusiifolia (Kth. in H. et B. Nov. gen. V, p. 207, t. 463, f. 8); syn. T. brevipes (DC. mem. soc. h. nat. gen. I). N. V. aliso bravo. Árbol bajo ó arbusto que se halla en la frontera de Bolivia (Brasil, etc.) y existe también quizás en O. — La madera del tronco es dura. Las hojas y la corteza se pueden usar como astringentes. Malvaceae. * Althaea rosea (Cavan, diss. 2, t. 29, f. 3); syn. Álcea rosea (L. sp. 966). N. V. malva real ó jaspeada. . o '1 Indígena en el Oriente, Grecia, etc.; se la cultiva á veces en los jardines y quintas de la K. A. La infusión teiforme de las flores de la variedad de flores negro-bennizos (flores Malcae arboreaú o. ¡i.u)-tciisis V. Alceae) se usa como emoliente y astringente , para gargarismos, lavativas, etc. Sirven también para teñir de color azulado. Las de la variedad de flores coloradas son empleadas en Francia para dar al vino este color. * Malva iiicaeensis (Ail. ped. n. 1416)— y ^ Malva rotund ¿folia (L. sp. 960). N. v. malvas. Yerbas introducidas de Europa y ahora espontáneas en terrenos cultivados de la R. A. Las flores tomadas en infusión son béchicas; las flores y las hojas se usan para hacer gárgaras en las inflama- ciones de la boca y de la garganta, para baños, lavativas y para cataplnsmas emolientes. De la raíz se ha hecho uso como eniohente y para envolver remedios irritantes y acerbos; también las semillas han sido oficinales, usadas para cataplasmas y como diuréticos. Malvastruní violaceum (Hieron., Bol. Ac. Nac. de Cieñe, en Córdoba t. IV, p. 15, n. 26); syn. Malva violácea (Phil. An. Un. Chil. 35, p. 162, n. 20). N. V. malvavisco morado. M. SJ. Malvaslrum peruvianum (As. Gr. ex Gr. Pl. Lor. n. 97). C. R. Ct. S. (cordilleras). Malvastrum ¡jlorneratum (Gr. Symb. n. 226). N. V. malvavisco. BA. (Bolivia). Malvastrum prostraturn (Hieron., Bol. Ac. Nac. de Cieñe. IV, p. 15, n. 27); syn. Malva prostrala (Phil. Bol. Acad. IV. lü — 332 — Aii. Un. Chil. ;:!5, p. 168, n. 23?, non Cav. diss. 2, t. 16, f. 3). N. V. '}it al oa visco. M. SJ. El decoctado de las hojas, flores y raices de las cuatro especies mencionadas se usa como diurético emoliente del mismo modo que las de Malva nicaeensis y rotim- di folia. Malvastrum lasiocarpum (Gr. Symb. n. 227); syn. Mal- va lasiocarpa (Si Hil. et Naud. Ann. se. nat. 27, p. 4Sj. N. V. uierourio. E. C. (Bras. mer.). Se le atribuye en la medicina popular propiedades antisiñlíticas ; los campesinos toman la infusión teiforme y ponen cat;( plasmas hechas con las sumedades floridas sobre úlceras v Haigas de carácter sifllítico. Sida Castellnaea7ia(Gr. Symb. n. 233); syn. Malvastrum Cast. (Wedd. Chl. and., t. 80 A.). N. V. yerba de la portería. Se cria en mucha altura en las Cordilleras de SJ. R. Ct. S. (Ijolivia y Perú). Los arrieros usan el rizoma (en lugar de radix Al- thaeae) en decoctado (ó infusión con agua fría ?) contra catarros de los órganos respiratorios. Sida rhombifolia (L. sp. 961). N. V. maivisco falso. C. T. El decoctado de la planta se usa como béchico y las hojas en cataplasmas emohentes. Las semillas son aperitivas y diuréticas. Parece que sus propiedades son análogas á las especies de Malva mencionadas. Sida macrodon (DG. Prod. I, 464, n. 59); y var. ínter media (St. Hil. Fl. Bras. merid., t. 36, f. 2). — 233 - N. V. mercurio. Esta yerba es en la li. A. considerada como remedio contra las enfermedades venéreas. Se toma su infusión como té y con ella se lavan las heridas y úlceras de carácter sifilítico. Sphaeralcea miniata (Spach. Hist. Nat. Veg. III, p. 352; Curt. Bot. Ma,g. 27, t. 5938); syn. Malva miniata (Cav. ic. III, t. 278). BA. C. Sphaeralcea bonariensis (Gr. Pl. Lor., n. 105); syn. Mal- va bonariensis (Cav. diss. 2, t. 22, f. 1). (Quizás variedad de la especie anterior?). BA. E. G. Sphaeralcea cisplaiina (St Hil. Pl. us. des Brés., t. 52). E. G. SF. (Urug.). Sphaeralcea rhordbifülia (Gr. Pl. Lor. n. 106). Ct. T. Sphaeralcea mendozina (Ph. An. Univ. Ghil. 21. [1862J, p. 392). M. R. SJ. G. y otras especies aliadas pertenecientes al mismo género tienen en la R. A. los nombres vulgares malva, malva- visca ó rnalvisco. Se usa con buen éxito el decoctado de las hojas y flores en los catarros é inflamaciones del pecho, para gárgaras en las inflamaciones de la boca y de la gar- ganta y para baños y lavativas emolientes. Las hojas se usan también para cataplasmas emolientes. Müdiola replans (St. Hil. Pl. Bras. mer. I, 212, t. 43). N. V. mercurial. E. (Bras. mer., Urug.). Tiene, según Parodi (1. c. p. 68), propied;tdes algo la- xantes; se usa el té en enfermedades sifilíticas. - 234 — MoiUoIk Caroliniana (Gr. Symh. ii. 215); syn. Malva Caroíiniana (L. sp. 969) ; y su vadedad brevipes (Gr. Symb. 11. 245). C. (sierra) (Am. cal. y templada). En Ghile la llaman pila- pila. Se toma la infusión teiforme; tiene propiedades atem- perantes y refresca la sangre (seg. A. Murillo, Bot. y mat. med. Chil. in An. Univ. Chil. r61, p. 590). Fugusia sulfúrea (St. Hil. Fl. Bras. mer. I, p. 196, t. 49). N. V. mercurio. E. Corr. T. J. (Bras. mer., Urug.), En la R. A. atribuyen á esta yerba propiedades antisi- filíticas y la usan como Modiola reptans, Sida macrodoii y Maíoastruin lasiucarpuni. * Gossypium harbadense (L. sp. 975). N. V. planta del al(jodo)i\ algodonero. Se han hecho pruebas de cultivo en O., J. y S., pero, según los datos que tengo, no han dado hasta ahora resul- tados de grande importancia. Además, por noticias que me han sido trasmitidas, sé de otros experimentos, sea con esta ó con otras especies del mismo género, hechos en Ct. K. SL. S. Ch. E. Corr. Las flores de todas las especies de Gossypium son pec- torales y emolientes ; las raices son diuréticas y se toman en cocimiento para las enfermedades de las vías urinarias. Las semillas contienen un aceite que sirve para el alumbrado y otros usos económicos. Los pelos de las semillas son el algodón que se usa en la industria para tejidos y en medicina para herida,s , quemaduras, etc. Las semillas sirven para engordar aves y bestias. Boinbaceae. Chorisia insignis (Kth. in Humb. Bonpl. nov. gen. am. 5, p. 297, t. 4S5, f. 1; sec. Gr. Pl. Lor. n. 109). — 285 — N. V. palo horradlo (Ct.); ¡jacluoii (T. S. J. O.); samuhú (Corr. Ch.). Ct. T. S. J. O. Ch. CoiT., (Am. cal.). El cocimiento de las flores suele usarse para fomentos contra dolor de cabeza y jaqueca. El algodón de las semillas se usa para hacer pál)ilo de \elas, almohadillas, hilo para tejidos ordinarios, se recomienda á los tísicos el uso de dichas almohadillas. El material para tra- bajar tejidos gruesos, bolsas, camisas (de indios), hilo grueso, sogas , etc., es proporcionado por la cascara inte- rior (floema) ó sus fibras, de las que hacen princii)al- mente uso lus indios del Gran Chaco setentrional. La madera es muy blanda; su ceniza dá mucha potasa. Los troncos de árboles viejos crecidos en terrenos mas estériles y secos (de Ct.) son hinchados en forma de barrica enorme y cubiertos de espinas; de ellos suelen hacerse bateas ó se les corta arriba y abajo, y una vez ahuecados y tapados forman asi toneles para líquidos. Los árboles que se crian en territorio muy fértil de los bosques subtropicales de T. J. S. y O. son mas altos, su tronco es relativamente menos hinchado y su corteza menos espinosa. Es posible que estas dos furnias sean dos especies distintas (conf. Bol. Acad. Nac. Argent. I, p. 352, not.). Sterculiaceae. Waltheria americana (L. spec. 941 ; DC. Prod. I, p. 492). N. V. malva. C. T. S. J. (zona tónida). Se la usa en lugar de las especies de Malva. Waltheria Durandinlia (St. Hil. etCambess. Pl, us., t. o6), N. V. (loranúinha ó dnrandinha. E. S. (Hras. mer.). El decoctado mucilaginoso de los gajos se usa contra catarros del pulmón y contra enfermetlades sifihticas en la — 236 — misma forma que la Sida macrodon, Malvastrum lasio- carpurn y Modiola reptans. Exteriormente, es empleada para lavar llagas y heridas. Tiliaceae. Luhea divaricata (Mart. Nov. Gen. et sp. I, p. 101. t. 63; St. Hil. Fl. Bras. mer. I, p. 226, t. 5RB). N. V. azote-caballos, azote de caballos, Francisco Alvarez*)'^ en lengua Guaraní : ivatingi. Árbol de 10 á 12 metros de altura mayor en E. (Bras mer., Paraguay). ftu madera es blnnca y liviana, pero tenaz y flexible; sirve para hacer baquetas, culatas de escopetas, suelas de zapatos, cabos de látigos, estacas, varas de carros y muchos otros trabajos de carpintería. Lineae. Linum scopanum (Gr. Pl. Lor. n. 149). N. V. cancha del agua, canchalajjua, retamilla. 0. 8L. Se toma la infusión teiforme de esta yerba para dul- ciñcar la sangre, para indigestiones, etc. * Linum i/sitatissiniuiñ (L. spec. 397). N. V. Lino, de la semilla linaza. La patria del lino no se conoce con seguridad, pero es probable que es originario del Oriente ó de las Indias Orientales. Es planta cultivada desde nuicliu atrás. En la R. A. su cultivo no es ni frecuente ni abundante. Tengo conocimiento de que es cultivado con provecho en T. SF. E. BA.; á veces se halla espontáneamente. La semilla (semen Lini) que tiene en el exterior de su membrana (tiesta) una cantidad de mucilago, es oficinal ■) No deja de ser interesante saber quién es ó ha sido el individuo Frwicisco Alvarez que ha dado su nombre á un árbol que se llama también azote de caballos — 237 - y el uso de la harina pava cataplasmas emolientes en in- ñamaciones, úlceras, infartos, etc., es muy conocido. El decoctado de la semilla molida se ha recetado interiormente para envenenamientos, especialmente los producidos por cantáridas, en catarros, tos, cálculo y otras enfermedades de la vejiga, gonorrea, diarrea, dismenorréa, etc.; exteriormente se le emplea para gárgaras, lavativas é inyecciones. — El aceite {oleurn liai) que contiene la semilla es un poco laxante y se usa como demulcente en inflamaciones y afecciones espasmódicas de los órganos respiratorios, de los intestinos, en envenenamientos, en fluidos sanguino- lentos del pulmón, estómago y vejiga; exteriormente, contra quemazones, para lavativas, etc.-, además, se emplea en la industria para la preparación de barniz; cuando fresco, se come en lugar de aceite de olivos. Las Abras de los tallos del Imo constituyen uno de los mejores ma- teriales para la fabricación de lienzo y papel. Erythroxylum ovatum (Cav. diss. S, p. 40 i, t. 338). T. J. O. (Am. mer.). Erijthroxijlum PeUctenanum (St. Hil. Fl. Bras. mer.. II, p. 72, t. 102). T. .T. O. (Bras. mer.). Erythroxylum microphnUuui (íSt. Hil. Fl. Bras. mer., II, p. 72, t. 103) var. cuncifoliuin (Mart. Abh, Bair. Akad. III, II, 343). O. (Bras.). Arbustos que tienen el nombre vulgar de coca del monte. Atribu}íen á las hojas las mismas virtudes que las (pie tiene la coca real {E. Coca Lam.) y las usiin como esti- mulante. Contienen probablemente cncaina como las de la coca real, aunque quizás en naenor cantidad. La madera es buen.a para muebles finos, bastones, etc., pero los troncos no se crian muy gruesos. - 23S — Malplghiaceae. Heteropteris glabra (Hook. et Ani. in Bot. Mise. III, p. 157). T. Baiilsleria nitrosiodora (Gr. Symb. n. 373). O. M asea g nía b revi folia (Gr. Symb. n. 37H). O. Tres enredaderas que tienen el nombre vulgar de sacha-huasca ó sacha-guasca. Se usan sus tallos flexibles y tenaces para atar varas de techos de paja para ranchos y casas de los campe- sinos; y, según dicen, son mas duraderas que el cuero que, á veces, se emplea para el mismo fin. Tricomaría Usíllo (Hook. Arn, in Hook. Bot. Mise. III, t. 101). N. V, usiilo, Sitrí pelado (C). M. SL. SJ. C. R. Ct. Arbusto en terrenos salados, do una altara de 1 á 2 metros. Dicen que tiene virtudes estomacales, sudoríti- eas y diuréticas. Zygophylleae. Tribuliis tcrri'stris (L. spec. 544); y la variedad lainigi- nosa (T. lauuginosus L. sp. 553). N. V. abrojo, roseta. M. SL. C. Ct. S. etc. (zonas tórridas y templadas). Las hojas se han usado como tónico -astringente en enfermedades de los ojos y de la garganta; también sirven en casos de diarreas, almorranas y en los de disuria, como diurético, etc. Larrea divaricata (Cav. ic. et deser. VI, p. 30, t. 560, f. 1.). N. V. jar illa hembra (C), jarUla del cerro (Gt.). P. M. SL. SJ. C. R. Ct. Sgo. - 239 — Larrea cuneifolia (Cav, ic. et descr. VI, p. 30, t. 560, f. 2.). N. V. jar illa crespa (M.), jarilla del campo (Ct), ja/iilla macho (C). P. M. C. SJ. SL. K. Ct. Sgo. Larrea nüida (Cav. ic. et descr. VI, p. 30, t. 557). N. V. jarilla de la sierra. P. M. SJ. R. (Chile). Tres arbustos de una altura de 3 á 5 metros ; tienen las mismas virtudes y aplicaciones. Los gajos se usan para obtener un color verde. El emplasto hecho con las hojas se emplea para las luxa- ciones y fracturas y es eficaz para aplacar las inflama- ciones que resultan en estos en sos. La hoja contiene una sustancia resinosa que es considerada como remedio veterinario para curar los esparavanes de los caballos y de las muías. La infusión de las hojas se ha usado en el pais contra el cólera, fiebres intermitentes y dolores del costado y como emenagogo para facilitar los partos y sobrepartos. Aphcándose cataplasmas hechas con las hojas cocidas al rescoldo, se produce un sudor abundante y se curan las afecciones reumáticas. Los arrieros curan los vasos gastados de los caballos y muías, calentando una piedra, poniendo sobre ella hojas de jarilla y haciendo asentar sobre estas la pata de la bestia durante algunos mi- nutos; dicen que el humo de la sustancia resinosa de las hojas endurece los poros reblandecidos del vaso. La madera es firme y tenaz y se usa para cabezas de recado, etc. Las hojas de L. nítida son, según A. Murillo (1. c. p. 593), un buen (?) alimento para las muías y la infusión de dichas hojas se emplea en Chile como vulnerario. Poriieria hygrometrica (Ptuiz et Pavón syst. p. 94). N. V. (jvayacan (C), cucharera (T.), chucupi (O.); en Chile palo santo. M. C. SL. SJ. R. T. O.; (Chile). — 240 — Arbusto de madera dura y resistente, semejante al boj, buena para toda (ílase de tallado y particularmente para cucharas y cucharones, cabos de látigos, etc. En Chile se emplea la leña para las enfermedades sifilíticas, ya sea en tisanas ó en baños, y también para los dolores reumáticos. Según A. Murillo (1. c. p. 593) obra también como un excelente vulnerario en casos de golpes y caídas, como también contrn, algunas neuralgias reumá- ticas. En las provincias de M. C. SL. Ct., etc., de clima seco, es arbusto bajo y el diámetro del tronco no pasa de unos pocos centímetros ; en T. y las demás provincias del Norte alcanza una altura que llega hasta 5 metros y el diámetro del tronco 2 á 3 decímetros. Plcctocarpn tetrncaiUa (Gilí. ex. Hook. Arn. in Bot. Mise. III, 166). N. v. rodajillo. M. C. SJ. SL. R. Ot. No conozco el uso de este arbusto, sino el de su tronco que sirve para leña de quemar. Tiene quizás propiedades análogas á las de la Porlieria kijgrometrica. Bulnesia bonariensis (Gr. Pl. Lor. n. 161). N. V. f/iiade ó ¡/Inaca. C. Sgo. T. J. Es arbusto ó árbol de poca altura (4—5 metros). Su madera es muy fina, tiene lindas vetas verdosas y oscuras y se emplea para hacer piezas torneadas de muebles, bastones, cabos de látigos, etc. La corteza de la raíz se usa como jabón; la parte leñosa hervida en agua es empleada para curar la sarna y otras enfermedades de la piel. Bulnesia ckííensis (Gay, Hist. Chil. l)ot. I, p. 475, atl. t. 15); syn. B. S chiche iidantzii (Hieron. ap. Gr. Synib. n. 430). N. V, rodajillo. — 241 — Ct. (Chile). Arbusto de 1 metro de altura mayor ; el tronco se usa como leña. Bulnesia Retamo (Gr. Pl. Lor. n, 162); syn. Zygophyllum Retmno (Gilí, in Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 166) y B. macrurarpa (Phil. Sert. Mend. alt. in Anal Univ. Chile 1870, tom. 35, p. 167). N. V. retamo. M. SJ. SL. C. Ct. R. Árbol de 6 á 8 metros de alturn mayor y un diámetro del tronco de á veces V2 metro; se halla principalmente en los médanos de las cercanías de las salinns. La madera es dura, de vetas muy hermosas y es usada para piezas torneadas de muebles, bastones, postes y otros trabajos; es además excelente para hacer carbón y para leña de quemar. Bulnesia foliosa (Gr. Pl. Lor. n, 163). C. Ct. R. T, Sgo.; en terrenos salados. Es arbusto ó árbol pequeño de 3 á 5 metros de altura mayor; su madera es semejante á la de las especies ante- riores. Bulnesia Sarniienti (Lor. iu lit.; Gr. Symb. n. 433). N. V. palo santo. Es árbol de 15 á 20 metros de altura; diámetro del tronco de y 2 á 7^ metro. Se cria en los llanos de las provincias de T. S. J. y especialmentb en el territorio de O. y Ch., en las orillas del Rio Bermejo, á veces en abun- dancia, formando bosques enteros. La madera es mas pesada que el agua: su peso específico es, según Parodi (1. c. p. 96), 1,350; el decímetro cúbico pe- sa, según F. Roibon (Exp. Cordob. Bol. II, p. 397 y 693), 1161 gramos. La madera tiene un olor agradable y es muy seme- jante en su veta, estructura, consistencia, etc., á la del guaya- can verdadero {Guayacum officinalc L.) y tiene virtudes -- á42 — depurativas y especialmente diuréticas y diaforéticas; su decoctado se usa en casos de sífilis secundaria, reumatis- mo crónico, gota, enfermedades crónicas de la piel, suspensión de la menstruación, etc. Su principio activo es, como sucede en el guayacan verdadero, una especie de resina (quizás idéntica á la de aquel árbol) que contiene en tanta abundancia que el tronco se incendia con facilidad aun estando enteramente vivo. Se emplea también la madera como la del ¡/iiayacan para el torno, y los habi- tantes del Norte de la K. A. se sirven de ella para fabricar mates, jarros, copas y otros objetos pequeños. Geraniaceae. * Geranium Robertianum (L. spec, 955.). N. V. robcrciana (en España y Chile). Yerba originaria de Europa; á veces espontánea en la R. A., V. gr., en BA. E. Ha sido medicinal en Europa y se ha usado el decoc- tado de la planta entera para fiebres intermitentes, tisis escrofulosa, hidropesía y el mal de piedra; es usado ex- teriormente para disolver infartos de leche en los pechos de las que recien han parido, como antiiácteo y también contra la gota. Ha servido igualmente como astringente y vulnerario, la yerba aplicada en cataplasmas sobre úl- ceras, heridas, etc. Ella contiene una sustancia amarga denominada geranina. Además, existen en la R. A. las siguientes especies indígenas: Geranium albicans (St. Hil. Fl. bras. mer. p. 83). C. Ct. (Bras. mer.). y su vnñQdiíidi glandulifernm {WiQYOw. Sert. Sanj. in Bol. Ac. Nac. Arg. de Cieñe. IV. p. 19, n. 33). SJ. Geranium fallax (Steud. Regensb. Flora Í856, p. 439). Ct. T. — 243 — Geranium intermediam (Bertero in Mem. di Torino t. 37, p. 46). C. (sierra); (Chile). Gcraniícm magellanicum (Hook 111. Antarct. voy. p. 251). C. (sierra); (territorio del estrecho de Magallanes). Geranium sessiliflorum (Cav. diss. 198, t. 77, f. 2): syn. G. brevipes (L'Hérit. in DC. Prod. I, p. 639). R. Ct. T. S. (sierras). Geranium hucanthum (Gr. Pl. Lor. n. 151). T. Geranium patagonicum (J. D.Hook. Bot. Ant. Voy. p. 252). P. Estas especies tienen quizás propiedades análogas á las de Geraniv/m Robertianum y Geranium maculatum, especialmente los rizomas relativamente gruesos de G. magellanicum, G. sessiliflorum y G. leucanthmn son astrinjentes ; su decoctado puede quizás usarse interior- mente contra almorranas, etc., y exteriormente para lavar heridas, etc. * Erodium cicutarium (Leman in DC. fl. fr. 4, p. 840). N. V. peludilla (C); alfüerillo. (P. SJ.). P. M. E. C. SJ. Ct. T. S. etc. Usan esta yerba originíiria de Europa como secante de heridas, úlceras, llagas, etc., y también en infusión tei- forme como febrífugo y estomacal. Los estilos persis- tentes de los frutos maduros (lue se enroscan en forma de tirabuzón, son muy higrométricos y pueden usarse para fabricar instrumentos para medir el contenido de humedad en el aire. * Erodium muschatum (Willd. spec. 3, p. 631). N. V. alfüerillo (E.); en España almizoleña . Planta casi cosmopolita, espontánea en E. Se la considera como buen forrage y se le atribuye pro- piedades excitantes y fliaforéticas. - 244 — Tropacoluiíi brasiliense (Gasai-etto, Atti tert. Riun. degli scienciat. Ital. 512 et Nov. stirp. dec. I, 9). N. V. sandia de víbora. Enredadera herbácea anual en T. S. (Brasil). Twpaculum yentaplnjllunt (Lam. dict. I, p. 605; ill. t. 277; St. Hil. pl. us. t. 41). Enredadera herbácea anual en BA. E. (Chile). Se recomiendan como antiescorbúticas. * Tropaeoluín majus (L. spec. 490). N. V. capuchina, mastuerzo, espuela de galán. Yerba enredadera originaria del Perú; se cultiva en los jardines, quintas, etc. Los botones y las frutas tiernas puestas en vinagre se comen como las alcaparas, y las hojas y flores como en- salada. Las flores y la yerba de esta especie se usan ^ambien como antiescorbútico. Wendtia calycina (Gr. Symb. n. 403) syn. Viviana caLy- cina {Gr. Pl. Lor. n. 158) y su variedad argéntea (W. argéntea Gr. Symb* n. 404). N. V. tó del burro. M. R. Ct. (sierras). Dicen que la infusión teiforme de este subarbusto es un excelente caminativo y es usada en casos de indi- gestiones, dispepsia, enfermedades del hígado, etc. Oxalis Martiana (Zuce. Denkschr. Bair. Acad. IX, n. 6). BA. E. O. (Bras. mer.). Oxalis articulata (Sav. in Dict. ene. 4, p. 686). BA. E. (Uruguay). Oxalis lobata (Sim9.., bot. mag. t. 2386); syn. 0. autumnalis (St. Hil. Fl. Bras. mer. I, 128, sec. Gr. Symb. n. 409). E. (Am. mer. templ.). Las tres especies tienen el nombre vulgar de macachi y sus rizomas son tuberosos. Estos tienen, en tiempo — 245 — de invierno, un gusto dulce y se comen crudos y cocidos ; son muy buscados por los cerdos. Oxalis bipartUa (St. Hil. Fl. Bras. mer. I, 125, t. 25). Ct T. (Bras. mer.). Oxalis ele¡/ans (Kth. in Humb. Bonpl. nov. gen. ani. 5, p. 234, t. 466). Ct. T. (Perú). Oxalis Hieronymi (Gr. Symb. n. 410). C. (sierra). Oxalis Commersuiiií (Pers. ench. 1, p, 519); syn. 0. sex- enata (Sav. in Lam. dict. 4,6S7). C. (Paraguay, Uruguay). Oxalis fdif'ormis (Kth. in H. B. nov. gen. 5, p. 245, t. 469). T. (cordilleras de Colombia). Oxalis Echegaraiji (Hieron. Sert. Sanj. in Bol. i\.c. Cieñe. Cord. IV, p. 19). SJ. (cordillera). Oxalis melilotoides (Zuce. Oxal. n. 49, Abhandl. Bair. Ac. IX, p. 239.); var. argentina (Gr. Symb. n. 415). T. S. (cordilleras del Perú). Oxalis amara (St. Hil. Fl. Bras. mer. I, 119). E. (Bras. mer.). Oxalis refracta (St. Hil. FL Bras. mer. I, 119). E. (Bras. mer.). Oxalis coDiiculata (L. sp. 624); var. repens (Zuce. Ox. n. 228). C. (zonas tórridas y templadas). Oxalis micro phy lia (Poir. suppl. p. 248); syn. O. repens (Thunb. Ox. 11, t. 1, f. 5). E. (Nueva Holanda? Ceylona, Madagascar). Oxalis glauca (Kth. in H. B. nov. gen. 5, p. 247, t. 471). T. S. (Bras.). - 246 — Oxalis Hedysaroides (Kth. in H. B. nov. gen. 5, p. 247) syn. Oxalis sepium (St. Hil. Fl. Bras. mer. I, p. 89). O. (América cal.) y otras especies mas se hallan en la R. A. y Ins llaman con el n. v. vinagrillo. Todas ellas contienen oxalato de potasio y oxalato de cal y son de gusto agrio. Algunas de ellas se pueden usar seguramente para extraer el ácido oxálico, tienen propiedades antiescorbúticas y antifebriles y sirven quizás contra las escrófulas. El jugo de las yerbas se emplea para sacar las manchas de tinta en la ropa. Las hojas de las especies menos agrias pueden comerse como legum- bre y en ensalada. Rutaceae. * Ruta chalepeusis (L. raant. 69); syn, /?. anyustifoUa (Pers. ench. I, p. 464). N. V. ruda. Subarbusto originario de la Europa meridional, culti- vado y á veces espontáneo en la R, A., v. gr., en la Sierra de Córdoba. Dicen que el olor de la yerba disipa el dolor nervioso de la cabeza, y, en tiempos de enfermedades contagiosas, se toman algunas gotas de la infusión como un buen preservativo. Las hojas y semillas son estimulantes y diaforéticas ; en Europa se han usado en dosis pequeñas para estimular el apetito y la digestión; en dosis mayores son irritantes y emenagogas y hasta pueden producir el aborto; se han usado especialmente en cólicos como carminativas y espasmódicas, contra indigestiones, histeria, epilepsia y fiebres intermitentes, haciéndolas comer crudas con pan y manteca. La infusión teiforme se usa contra la esquinencia. Son además usadas para baños y, en un- güentos hechos con grasa, contra los dolores reumáticos y para cataplasmas irritantes. El aceite que las hojas, — 247 - frutas, etc., contienen se ha empleado también contra la liisteria y suspensiones de la menstruación; administrada en fricciones calma los dolores reumáticos. La infusión vinagrosa de las hojas es empleada en los casos de fie- bres tifoideas. Zanthoxylum MaranjUlo (Gr. Symb. n. -435;. N. V. naranjillo (O.); tembetanj-7ni en el Paraguay. J. O. Ch. Corr. (Paraguay); árbol de 8 á 10 metros de altura. Según Parodi (An. de la Soc. Gient. Arg. X, p. 224). las hojas y la corteza contienen un nuevo alcaloide y propiedades sialagogas, sudoríficas, diuréticas y estimu- lantes. Zanthoxylum Coco (Gilí, in Hook et Arn. Bot. Mise. III, 168). N. V. ocñ (C), cochiichu (T.), sanco hediondo (S.O.). C. SL. T. S. O. (sierras); (Bolivin). Altura mayor del árbol, 12 metros; diámetro mayor del tronco, 7* lííetro. Las hojas del coco se emplean para obtener un color oscuro. Pretenden que se cura la jaqueca aspirando el aroma de la. flor. La corteza y las hojas tienen pro- piedades sudoríficas, diuréticas y astringentes. La ma- dera es de color amarillo y tiene hndas vetas; sirve para muebles, mostradores de tienda y también para construc- ciones de ranchos, cercos, etc. La corteza del tronco se usa para curtir cueros. Zanthoxylum. hyemale (St. Hil. Pl. us. des Brés. t. 37). E. (Bras. mer.). Es árbol de 6 á 7 metros de altura; y Zanthoxylum sorbifolium (St. Hil. Fl. Bras. 1, t. 15 ex det. Gr. Symb. n. 437). N. v. salteo hediondo. Árbol de 2 á 4 metros de altura y de un diámetro mayor del tronco de '/^ metro en S. O. (Bolivia). Bol. Acad. IV. 17 ^ ;>48 - Se dice que sanan los enfermos del oido con el polvo de la corteza de estos árboles. La madera es dura, buena, y sirve para varias con- strucciones, muebles, etc. * CÜrns medica (flisso ann. mus. 20, p. 199, t. 2, f. 2). N. V. cidro-lÍ7noii, cidro, cidrera-, agriirne en Italia. Árbol ó arV)Usto originario del Asia meridional; se cul- tiva en todos los países de un clima cálido y en muchos parajes de la R. A., pero relativamente poco. La cor- teza exterior de las frutas (flavedo corticis CUri) es oficinal y se usa como estomacal y digestivo, como también para mejorar el gusto de otros medicamentos; el aceite (oZei^w Citri) que "de ellas se extrae, es usado para perfumes, ungüentos, etc. Con la corteza entera se preparan con- fítes, dulces, etc. y se usa además para condimento de varios manjares, para licores, etc. Con el zumo agrio de la, fruta se prepara una bebida refrigerante, la limonada; se le emplea también para condimento de comidas de carne, pescado, etc., para la preparación de ponche, y se le atribuye propiedades antihelmínticas. El ácido cítrico que este zumo contiene, se usa en medicina como refrige- rante y antiescorbútico. Las hojas que también contienen un aceite volátil, poseen propiedades tónicas y antiespas- módicas. Los gajos se usan para teñir de color amarillo. Las semillas contienen un aceite grasoso que puede usarse para quemar. La raíz se emplea en las Antillas contra fiebres intermitentes. La madera es muy buena, especial- mente para el torno, y sirve para construcción de mue- bles finos, etc. * Citrus spinosissima (Meyer esseq. 247). N. V. Ivnon de olor. Es originario (?) de Guyana y del Brasil; en la R. A. se le cultiva relativamente raras veces, v. gr., en E. Las frutas son mucho mas pequeñas que las de la especie — 249 — anterior y su tamaño es el de una nuez (de J itylans regia)] se ,'Usan como aquellas. Parece que es arbusto y no árbol; solo le he visto como ingerto en el siguiente. * CUrus LimeUa (Risso ann. mus. 20, p. 195, t. 2, f. 1). N. V. lima, limero, limón dulce. Árbol ó arbusto originario de las Indias Orientales, se cultiva á menudo en la R. A. La pulpa de la fruta es de un dulce desabrido ; de su corteza y de las flores se extrae un aceite volátil, que se emplea en perfumería, etc. * Citrus Limonum (Risso ann. mus. 20, p. 201). N. V. limonero, limón a hojas en lugar de las especies de Cassia (sen verdadero) y se les atribuye las propiedades de éstas. Rhijiichosia edulis (Gr. Pl. Lor. n. 229). N. V. albarillo del ca^npo. C. y seguramente en otras provincias. Según Lorentz se come la yerba cocinada en la comida denominada puchero. Machaerium Tipa (Benth. ex Gr. Symb. n. 6-30) syn. M. fertile (Gr. Pl. Lor. n. 236) et Tipuana speciosa (Benth. ex icouíi Gibelli in Uegensb. Flora, 1^^73, t. 3). N. V. tipa. T. S. O. J. dh. Corr. Árbol muy coposo, de tronco derecho, alto de 12 á 15 metros, y cuyo grueso llega hasta un metro de diámetro. La madera se deja labrar con facilidad y sirve para muebles, tablones de mostrador, varas de carros de trá- fico y yugos de uncir bueyes. Su cascara lastimada por incisiones hechas á propósito, vierte una especie de kino (resina) colorado, semejante á la sangre de dragón (que procede de Pterocarpus draco [L], de Dracaena Drogo [L.] y de algunas especies de Calamus). La cor- teza sirve para curtir cueros. Las hojas son muy ape- tecidas por el ganado vacuno y sirven como pasto en años de escasez. Machaerium pseiido-tipa (Gr. syml). n. 631), N. V. palo mortero:, tipa. O. Ch. Corr. (?) (Bolivia). Árbol de menor altura y menor circunferencia de tronco que el anterior, pero su madera es de mejor clase. Como — 276 — su nüinl)re vulgar lo indica, se usa priucipalmente pura fabricar morteros de machacar granos de maiz, etc. Ade- más, sirve para los mismos usos que la de Machaerium Tipa. Lonchocarpus nUidus (Benth. Fl. Bras. fase. 29, p. 279). N. V. hir/ueron. Es arbusto alto ó árbol bajo en E. (Bras. mer.). Dicen que tiene propiedades venenosas. Gouriiea decorticans (Gilí. ap. Hook. et Arn. in Bot. Mise. III, p. 208, tab. 106). N. V. cliañar; chanar-brea (M.). Árbol ó arbusto de 5 á 7 metros de altura y '/s metro de diámetro mayor tiene el tronco; se encuentra en toda la K. A. La fruta es comestible, dulce, de agradable sabor, y uno de los principales alimentos de los indios salvajes del Gran Chaco; se hace con ella una Ixíbida fermentada (aloja de chañar) , aguardiente, y se le atribuye pro- piedades antiasmáticas. Las hojas son consideradas como un magnifico emoliente y la infusión se usa contra el asma. La madera es fuerte y apreciada; se emplea pera cabos de hachas, martillos y demás herramientas, como también para la construcción de ranchos, cercos, etc.; es un buen combustible. La corteza del chañar es empleada como remedio en los flujos de sangre. Cacsalpiíiia praccox (liuiz et Pav. Fl. Peruv. t. 376, ined. ex descr. ap. Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 20S). N. V. brea. M. SJ. SL. C. K. Ct. Sgo. Árbol que tiene hasta 6 metros de altura y su tronco Vs metro de diámetro. Su corteza, de color verde fresco, puesta sobre brasas exhala al quemarse un aroma suave y agradable y se usa como incienso. De incisiones he- chas en Jos troncos y ramas, sale una especie de goma- - 277 — resina, semejante á la «^'onia arábiga, que sirve como cola para pegar madera y es de buena calidad ; v. gr., la emplean para componer las fracturas de las guitarras. Esta misma goma se encuentra á veces en gran canti- dad en árboles picados por ciertos insectos (larvas de coleópteros ?) y tiene un olor aromático y un gusto dulce agradable, por lo «pe los niños la buscan para comerla. De líis cenizas lejiviales de la madma. se hace uso para condimento de la comida llamada mazamorra (hecha con granos de maíz). La madera es buena para construc- ción de muebles y la leña se quema en las iglesias de campo, etc.. en vez de incienso. Cacsaipinia Gillksil (Wallich in Hook. Bot. Mise. J, 129; Benth. Fl. bras.' fase. 50, p. 71) syn. I'uinciana Gilliesii (Hook. Bot. Mise. v. I. p. 129, t. 34). N. V. lagaña de perro (C), mal de ojos (M.), disci- plina de monja (M.), piscala (R.), en (,'hile donde se cultiva para adorno en los jardines, harhon. P. BA. M. SL. SJ. G. R. Ct. (Urug.). Este arbusto es insectívoro. Insectos pequeños, v. gr., mosquitos, zancudos, etc., se encuentran pegados en todos sus tallos floríferos, vainas, etc., \m donde existen glán- dulas (pelos glanduliferos) (pie segregan un líquido pega- joso y venenoso para los insectos. Ellos mueren en poco tiempo y, por medio del mismo jugo venenoso que segre- gan las citadas glándulas, la planta digiere con excepción de la quitina á todas las sustancias que contiene el in- secto muerto. Igualmente sabe la planta digerir carne y la albúmina de los huevos. Moscas domésticas y otros insectos de tamaño mayor mueren también cuando toman del jugo venenoso de las glándulas, y esto en hora y media- Es por esta razón que los gajos pueden usarse para extirpar estos insectos de las casas, poniendo gajos floríferos de esta planta en las ventanas ó colgándolos en medio de la pieza. — 378 — Estoy preparaiulo un trabajo mas extenso sobre esta planta que es muy interesante. Creo que existen otras especies mas del mismo género, v.gr., la C. mimosifoLia (Gr. Pl. Lor. n. 210) que también son insectívoras. Las legumbres del arbusto contienen igualmente un principio venenoso; me ha sido comunicado el caso de algunos extranjeros que, tomándolas por legumbres de algarrobos negros, las chuparon y se enfermaron seria- mente. Con las flores se tiñe de color nmariüo. Caesalpinia melanocarpa (Gr. Pl. Lor. n. 242; Symb.n.644). N. V. guayacan; yuayacan negro. SL. T. Ch. Corr. (Parag.). Arl)oi de 8 metros de altura mayor que crece tortuoso; su tronco tiene hasta -/-o metro de diámetro. Las vainas (Uamadis algarobiUa en Corr.) contienen mucho tanino (hasta 2G por ciento) y sirven para hacer tinta negra y curtir cueros. Para este último destino se usa igualmente la corteza. El tronco tiene un corazón morado-oscuro casi negro con vetas muy bonitas, y se usa la madera que es dura y pesada para muebles, cabos de herramientas, objetos torneados, trapiches, mazas de ruedas de carretas, marcos de puertas, etc. Los indios hacen puntas de flechas con esta madera; también sirve el serrín para curtir. La infusión en agua caliente de la fruta macha- cada y colada, sirve como tinta de (iscribir, mezclándola con caparroza (jueniada. Con esta misma tinta suelen teñirse los sombreros que se fabrican en las provincias de Tucuman y Salta. Hoffinannseggia Falcaria (Cav. icón, et descr. 4, p. 63, t. 392). N. V. porotillo silvestre. P. BA. M. SJ. SL. R. C. Ct., etc. Yerba que se emplea como sustancia colorante para el color punzó. Ignoro el modo de sacarle de ella. - 279 -- Los pequeños tubérculos de los rizomas, llamados en Catamarca carminchd, son comestibles. Parkinsoaia aculeata (L. hort. Cliff. 157, t. 13.). N. V. Cina-Cina. Arbusto ó árbol pequeño indígeno en E. (?) Corr. O. Ch. (Am. caliente) y cultivado para formar cercos vivos en muchas provincias, especialmente las del Litoral. La corteza y las hojas se usan para hacer engordar los pár- vulos cuando, de resultas de alguna enfermedad, han quedado muy delgados. Las flores y las semillas son empleadas para combatir las fiebres intermitentes. Cassia leptophyUa (Vog. Syn. gen. Cass. p. 13, et Lin- naea XI, 652). N. V. ti p illa ; carnaval (asi llamado por la época en que se cubre de ramos de flores hermosísimas). Árbol de S á 10 metros de altura mayor, cuyo tronco alcanza á uu diámetro de 72 metro. Su madera es de poco valor. Cassia bicapsularis (L. spec. 538). N. V. yerba del burro, sen. Arbusto de un metro, altura mayor, en C. Ct. T. S. J. O. (Bülivia). Cassia corymbosa (Lam. dict. I, p. 644). N. V. sen. Arbusto en E. Cassia Hilariana (Benth. Fl. Eras. fase. 50, p. 108). N. V. sen. Arbusto de un metro de altura mayor en E. (Eras, mer.). Cassia tomentosa (Lam. díct. 1, p. ,647). N. V. sen. Arbusto de un metro, altura mayor, en C. Sgo. T. S. O. (Am. mer.). Bol. Acad. IV. 19 — 280 — Cassia neylecta (Vog. ín Liniiaea X, 391; et Syn. Cass. 32). Arbusto en T. (Bras. mer.) y var. entreriana (Gr. Symb. n. 655) en E. Cassia occidentalis (L. sp. 539). N. V. sen taperibá, taperingud, café de Bonpland. Arbusto en E. Corr, Ch. O. S. (x\m. tropical). Cassia hirsuta (L. f. supp. p. 23í). N. V. sen peludo, pitón cornuto. Arbusto en T. S. y seguramente otras provincias del Norte de la R. A. (Am. cal.). Cassia piiifera (Vog. Syn. Cass. 23; Benth. Fl. Bras. fase. 50, p. 115). Arbusto en S. (Am. cal.). Cassia Hooheriana (Gilí, in Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 210). N. V. chusno (C), visquillo (R.), nogal de zorro (R.), mistól, mistolillo (Ct.). Arbusto en las sierras de SL. C. Ct, R. T. S. J. Cassia suba lata (Gr. Pl. Lor. n. 250) y su var. tomen- tosa (Hieron.); s}^!. Cassia tomentosa (Gi'.Symh. n.Q^i, e. p., non Lam.). Arbusto de hasta 2 metros de altura ó arbolito en las sierras de C. Ct. T. Cassia Arnottiana (Gilí. ap. Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 211, sec. determ. Gr. Symb. n. 661). N. V. sen. Arbusto en las sierras de C. M. (Chile). Las hojas de todns las especies de Cassia hasta ahora mencionadas, tienen propiedades drástico-purgantes y emo- lientes, especialmente las de C. tomentosa, bicapsularis y occidentalis y se usan en casos de indigestiones, herpes, histeria, etc. Las semillas de C. occidentalis y de C. — 281 — Hookeriana son suaves, laxantes y eméticas; no obstante, pierden esta última propiedad una vez tostadas y em- pleadas en este estado como un equivalente del café. La corteza de la raíz de C. hirsuta, occidentalis y quizás de otras especies mas tiene virtudes purgantes y antifebriles, y la de C. hirsuta se usa en otras partes de Sud-América para embarbascar. En el Brasil usan la raíz de C. occi- dentalis como purgante en casos de pujos, hidropesía y envenenamientos. Las hojas de todas lys especies se em- plean exteriormente en cataplasmas emolientes. Cassia aphylla (Cav. ic. et descr. 6. p. 41, t. 561), N. v. cabellos de indios, pichana. BA. M. SL. C. Ct. S. Los ramos de este arbusto solo tienen hojas muy pe- queñas abortivas y se usan para fabricar escobas, Cassia crassiramea (Benth. ín Hook. ic. t. 1063). N. v. sumalat/ua. Arbusto en Ct. J. J. S. (Bolivia). Es semejante al anterior, pero sus tallos son mas grue- sos y tiesos y sirven para el mismo destino. Bauhinia candicans (Benth. Fl. Bras. fase. 50, p. 201) syn. B. forfwata (Hook. Arii. Bot. Mise. III, 211, non Lk. Ic. Plant. sel. Ber. t. 36). N. V. mahagoni, cauba. BA. E. Corr. (Uruguay). Árbol de 10 metros de altura mayor. La madera tiene Hndas vetas y es apreciada para la fabricación de mue- bles. La corteza y las hojas tienen propiedades astrin- gentes y su infusión se usa para gárgaras, lavar heridas, etc. Zuccagnia punctata (Cav. ic. et descr. 5, p. 2, t. 403). N. V. pus-pus, jarilla pus pus, jarilla de la puna, jar illa macho, jarilla pispa, jarilla de pispito. Ai'busto con altura mayor de 2 á 3 metros en las faldas de las cordilleras de SJ. R. Ct. S. (Chile). — 282 — Es muy resinoso y se pretende que es eficaz [para la curación de ciertas enfermedades, como ser el costado, el pasmo y reumatismos. La usan también para teñir la lan:i de color plomo. Piptadeaia cominunis (Benth. Journ. of Bot. IV, 3J7 sec. det. Gr. Symb. n. 693) var. excelsa (Gr. Symb. 1. c). N. V. soc/ia-cebil, cebil blanco, horco-cebil. T. O. (Brasil, Paraguay). Árbol elevado que se cria hasta 20 á 20 metros de altura y cuyo tronco alcanza un diámetro mayor de 1 metro. La madera es de regular clase y se ocupa para tirantes, pértigos de carretas, construcción de casas, etc. Piptadenla Ccbíl (Gr. Symb. n. 694); syn. Acacia Cebil (Gr. Pl. Lor. n. 272). N. V. cebil, cebil colorado. Ct. T. S. J. O. Ch Corr. (?); se halla en abundancia. Árbol de hasta 20 metros de altura mayor y cuyo tronco alcanza á un diámetro de un metro. Las hojas que se caen durante el invierno y se secan en el suelo son, en años de escasez de otro posto, un buen alimento para los animales, especialmente los vacunos. La corteza ofrece un material muy bueno para las curtiembres, pues contiene hasta 10 por ciento de tanino. La madera es de un valor secundario, debido á que se raja mucho, y se usa para rayos y pértigos de carretas, marcos de puertas, horcones ó pilares para galpones con techo de paja, ara- dos y otros fines, pñncipahnente para combustible. Según una nota añidida por L T. (Inocencio Torino) a) Catálogo raz. de las plantas medicinales de Catamarca por F. Schickendantz en Anal, del Círculo Méd. Arg. tom. V. p. 122, el cebil (las semillas ?) ocasiona el aborto, y, según dicen, impide el desarrollo del huevo en las gallinas y lo hace expulsar antes del término. El tronco y los ramos segregan una goma resinosa, á veces en abundancia. Prosopis nisrifolia (Gr. Pl. Lor. n. 254). N. V. vinal, visual. Árbol de 8 á 10 metros de altura mayor, cuyo tronco alcanza á un diámetro de Ya metro en C. Sgo. Las hojas se usan como medicamento popular para las enfermedades de la ^ñsta y contienen según Parodi (1. c. p. 72) un nuevo alcaloide azoado, no cristalizarle (vina- lina), de sabor amargo en primer lugar y luego sensible- mente astringente. La madera es buena para trabajos de carpinterin . Prosopis nii/ va (Rieron.):, syn. Prosopis Algarrobilla \íiy. nigra (Gr. Symb. sub. n. 673). N. V. algarrobo negro, alg. dulce, alg. morado. P. C. SL. SJ. Ct. R. Sgo. Árbol de una altura hasta de 8 á 10 metros y de diámetro en el tronco de 72 á V^ metro. La goma-resina que segrega el tronco del árbol se usa para la fabricación de diferentes colores oscuros. La corteza se usa para curtir cueros. Los campesinos, con unn infusión de las frutas, curan enfermedades de los ojos. Sus vainillas dulces se comen y con ellas se hace arrope y el pakig, masa alimenticia, cuyo uso es recomendado en las enfer- medades veneren s; son además un alimento muy fuerte con el que engorda mucho el ganado vacuno y el caballar. La madera sirve en la construcción de casas para tiran- tes, varas, horcones, puertas, marcos de ventanas, etc. Prosopis juliflora (DC. Prod. II, p. 447, n. 13 sec. det. Gr. Symb. n. 670). N. V. algarrobo negro:, igopé-gi/aza, (Corr.). Árbol alto en BA. (?) E. Corr. O. (Am. cal.— Chile V). El nombre mencionado no pertenece quizás á nuestra especie y abrigo mis dudas sobre la determinación hecha pur el Sr. Grisebach. Es probable (^ue ella no es mas que una variedad de nuestra Prosopis nigra. — 284 — El imanado come las frutas que tienen un gusto dulce pero menos pulpa que las de la anterior y son monili- formes. Los habitantes de Corr. hacen de ella una bebida llamada chicha. La madera es estimada y se usa para los mismos destinos que la de la anterior. Prosopis alba (Gr. Pl. Lor. n. 255. Symb. n. 672). N. V. algarrobo blanco-, ígopi'-pará, ibopé (Corr.). C. SL. Ct. R. Sgo. T. S. J. Ch. Corr. etc. Árbol que crece hasta 12 metros de altura, y el diáme- tro del tronco tiene hasta 1 metro. De la fruta (algarroba blanca ó amarilla) machacada se hace, dejándola fermentar con agua fria, una belñda semejante á la cerveza (llamada aloja ó chicha de algar- robo) y se le usa además para destilar aguardiente. Los campesinos dicen que la fruta es muy saludable y nutri- tiva, chupándola, y que tiene la virtud de disolver el cálculo de la vejiga. Curan las fracturas de huesos sin heridas con un emplasto que se hace con las frutas verdes (después de separar las semillas) y con la corteza, machacando una y otras con sebo de cabra ó de carnero. Las semillas tostadas pueden servir para reemplazar al café. La madera es de un color rojizo, pero es mas liviana que la de Prosopis nigra y sirve principalmente para trabajar puertas, ruedas hidráulicas, ruedas de carros, la construcción de casas, ebanistería y construcciones navales; es también considerada como un excelente y abundante combustible. La corteza y aún las hojas pue- den emplearse en las curtiembres. Prosopis Panta (Hieron); syn. P. alba var. Panta (Gr. Symb. sub. n. 673). N. V. algarrobo, imparta ó panta. Árbol semejante al anterior en los montes de C. Las frutas, de forma mas recta ó solamente menos encor- vada y no semi-circular ó circular como las de Pr. alba ~ 285 — son también mas pulposas, y se usan del mismo modo que estas. La madera es semeiante á la del algarrobo negio y blanco, es de color rojizo y se usa para la construcción de casas, etc., pero es muy vidriosa y no se deja hachar en trozos derechos. Prosopis Algarrobilla (Gr. Pl. Lor. n. 256; Symb. n. 673); syn. Prosopis dulcís (? Hook. et Arn. Bot. Mise. III, 203; non Kunth, mim. p. 110 t. 34 nov. gen. 6 p. 307) et P. inermis (Gilí, in Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 203, non Kunth in H. B. nov. gen. am. 6, p. 307); et Prosopis Sandubeij (Lorentz in Gr. Symb. n. 671 ex spec. authentico)! N. V. calden (SL.), algarrobillo (C), ñandubog (negro) (E.). BA. E. SF. Corr. SL. C. Árbol que tiene hasta 10 metros de altura y un tronco de V* nietro de diámetro. La fruta es agria y contiene tanino, no obstante la comen el ganado y los avestruzes. La madera rojiza es de muy buena calidad, es sólida, dura y pesada, y se usa para la construcción de casas y ranchos, postes de cercos y corrales, puertas, muebles ordinarios, etc.; es además un excelente combustible. Prosopis flexuosa (Di.'. Prod. II. p. 447, n. 9 ex descr. ap. Hook. et Arn in Bot Mise. III, p. 203. n. 319> forma a). N. V. Lamer o algarrobo de caballo. P. M. SJ. Árbol; los animales caballares, vacunos, etc., comen sus frutas. La madera es semejante á la de las especies anteriores y se usa para los mismos destinos, pero parece que el tronco del árbol no se cria muy grueso (no tengo noticias seguras!). Prosopis ferox (Gr. Symb. n. 674). N. V. churqui. — 286 — Se halla en los valles de las cordilleras de J. Es un arbusto ó árbol pequeño de madera buena para ciertos destinos y para combustible. Prosopis adesmioides (Gr. Pl. Lor. n. 258; Lymb. n. 675). N. V, tentitaco, quentUaco, tintataco. C. Ct. R. S. J. Arbusto de una altura de 3 á 4 metros y diámetro mayor del tronco de ^U metro. La fruta puede comerse y se hace con ella aloja y aguardiente. La madera es muy buena, sirve para camas y ruedas de carros, morte- ros de pisar maiz y otros destinos; contiene, como tam- bién la cascara, mucho tanino y son empleadas para curtir cueros y para fabricar una tinta negra. Prosopis hinvilis (Gilí. ap. Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 204). N. V. alíjarrobUla. Arbusto pequeño, rastrero, muy espinoso; en C. Prosopis sericantha (Gilí. ap. Hook. et Arn. Bot. Mise. III. p. 204). N. V. alf/arrobilla. Arbusto de una altura que llega apenas á un metro, es muy espinoso y tieso en los alrededores de las salinas grandes en C. SL. K. Ct. Sr^o. Las frutas de estos dos últimos arbustos sirven de alimento para los animales. Prosopis strombulifera (Benth. in Hook. Journ. of Bot. IV, 352 et var. abhreviata (syn. P. abbreviata Benth. in Hook. Journ. of Bot. IV p. 353). ^ N. V. retorto7i, retortoño, retortina, saca trapo. Arbusto pequeño de ^¡s metro de nltura en P. M. SL. C. SJ. R. Ct. especialmente en terrenos salados. Las legumbres enroscadas en espira apretada tienen virtudes astringentes, se mascan como remedio casero contra el dolor de muelas y de encías; el decoctado se — 287 — usa para gárgaras contra las inflamaciones de la garganta. Además, las frutas y las raices se emplean en las cur- tiembres y tintorerías. Prosopis striata (Benth. in Hook. Lond. Journ. V. 83). N. V. manca caballo. Arbusto en P. M. Ct. No le conozco ningún uso especial. Üesnianthusvirgatus (WiWá. spQc. i, p. 1047 exclus. syn. Pluk. et Rheed). N. V. yucari nina. Arbusto en E. Corr. (Zona cal). Las fibras de los tallos pueden emplearse para tejidos. Mimosa sensitiva (L. spec. 1501). N. V. sensitiva, adormidera. T. S. etc. (Am. mer. — India Oriental). La raíz tiene un olor muy desagradable y un gusto amargo; tomándola en dosis mayores, es purgante y emética, mientras que, en dosis pequeñas se dá al con- trario para el vómito y la diarrea. Las hojas se usan en casos de dolores de caderas. En Malabar se hace uso de la raíz contra la hipostenia, almorranas y fístulas del intestino grueso. Mimosa carinata (Gr. Symb. n. 687). N. V. lata (SL.). SL. C. J. Arbusto de 3 á 4 metros de altura. Mimosa farinosa (Gr. Pl. Lor. n, 265; Symb. n. 688). N. V. tusca blanca, chirqui. C. SL. R. Ct. T. Arbusto de 2 á 3 metros de altura. Mimosa Lorentzii (Gr. Pl. Lor. n. 266; Symb. n. 691). N. V. garr abato. Arbusto en C. Ct. Sgo. Estos tres arbustos tienen madera buena para tornear - 288 - pequeños objetos, hacer cabos de herramientas, etc., y son empleadas como buen combustible. Acacia Visco (Lor. in Gr. Symb. n. 696) syn. A. Visite (Gr. Pl. Lor. n. 269). N. V. vism^ viseóte, visco-arca. Ct. T. S. Árbol de una altura que llega hasta 10 metros y de un diámetro de 7^ metro en el tronco. La corteza del tronco se usa en las curtiembres. La madera es de buena clase para fabricar muebles, para la construcción de casas, ranchos, etc., pero l:i atacan fácilmente las larvas de ciertos coleópteros. Acacia riparia (Kth. in Hunib. Bonpl. nov. gen. am. 6, p. 276), var. tucamanensis (Gr. Symb. n. 695), syn. Acacia tiícumanensis (Gr. Pl. Lor. n. 26'>), et var. subscan- dens (Gr. Pl. Lor. sub. n. 268; Symb. sub. n. 695). N. V. garabato, garabatá (T,), yucari-putá (Corr.). T. J. O. Corr., etc., (Brasil, Paraguay). Arbusto ó semienredadera; la madera es dura, firme, y se hace uso de ella para cabezas de recados, cabos de hachas y demás herramientas. Acacia paniculata (Willd. spec. 4, p, 1074; Ic. Benth. in Fl. bras. 15, 2, t. 102, sec. det. Gr. Symb. n. 697). N. V. yapan. Arbusto en J. (Bras. Bolivia) y cultivado en E. Acacia furcata (Gilí. ap. Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 206; Gr. Pl. Lor. n. 270). N. v. garabato macho, uña de gato. Arbusto de 1 á 1 '/a metro de altura en M. SL. C. Ct. R. Sgo. Su madera es buena, pero el tronco no se cria muy grueso. Acacia praecox (Gr. Pl. Lor. n. 271). N. V. garabato hembra. C. Ct. Sgo. S. — 289 — Arbusto ó árbol pequeño de 3 á 4 metros de altura cuyo tronco alcnnza '/^ metro de diámetro. La madera sirve para cabos de hachas y demás herramientas, etc. ; es buen combustible. Acacia Arooyia (Gilí. ap. Hook. et Arn. Bot. Mise. III. p. 206; Gr. Pl. Lor. n. 274; Symb. n. 701) et var. mo- nUiformis (Hieren.), syn. A. monilifonnis (Gr. Pl. Lor. n. 273) et var. cochlearis (Gr. Symb. sub. n. 701). N. V. tusca (Ct. T.); espinWo (C); vais (O. Bolivia). Árbol ó arbusto que tiene hasta 5 metros de altura y ,el tronco y 3 metro de diámetro; se halla en abundancia y frecuentemente en M. SL. C. SJ. R. Ct. T. S. J. (Bolivia). Las hojas secas son un buen alimento para las vacas y las cabras en los años secos y tiempos de escasez de otro pasto. Las frutas hacen engordar mucho los gana- dos vacunos y caballares. La aloja que con ellas se hace es considerada como antivenérea. La flor amarilla llamada aroma se usa para hacer perfumes y es de rica fragancia. El decoctado de las hojas y la tisana confec- cionada con ellas, tiene, según dicen, virtudes antisifilíticas. Las hojas secas se consideran como un buen secante para las heridas. Los troncos proporcionan muy buena leña de quemar y su rama espinosa es de un uso general para cercos. Acacia atramentaria (Benth. in Hook. Lond. Journ. of Bot. I, 392), syn. Prosopis adstringens (Gilí. ap. Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 204) et i. Prosopoma (Schnyder Ann. de la 3ocied. cient. v. I, ). N. V. espinillo (C); algarrohillo (C); brea (E.). Árbol de 5 á 7 metros, altura mayor, y Vs metro de diámetro del tronco, en E. M. SL. SJ. C. Las vainas {algarrobilla), se usan para fabricar tinta y en medicina como astringente fuerte. Los animales no — 290 — las comen. Del tronco hacen horcones para ranchos ; es además buena leña de quemar. Acacia Cavenia (Hook. et Arn. in Bot. of Beech. Voy. V. 1 p. 21). N. V. espino; espinillo (Sgo. C. E.); tusca (C); churqui (T.); Coven (en Chile). Arbusto nmy común en toda la R. A., de 5 metros de altura mayor y cuyo grueso del tronco tiene hasta -¡5 metro. Los ramos y el troñco producen una especie de goma semejante á la goma arábiga. Las flores se colec- cionan bajo el nombre de aroma para hacer de ellas té y perfumes. La madera es de superior clase y, debido á sus vetas jaspeadas, es apreciada para enchapadlos; se usa igualmente para yugos de uñir bueyes, postes de cercos, etc.; es buena leña de quemar y superior para fabricar carbón; los ramos muy espinosos se emplean para cer- cos. La ceniza de la madera se usa en Chile para la fabricación del jabón. Acacia bonariensis (Gilí. ap. Hook. et Arn. Bot. Mise. Iir, p. 207). N, V. ñapindá,. Arbusto semi-enredadera en BA. E. etc. (Bras. iner. Uruguay). No le conozco uso especial. Calliandra portoricensis (Benth. in Hook. Lond. Journ. of Bot. L 527), syn. Acacia portoricensis (Willd. sp. 4 p. 1067) et Mimosa port. (Jacq. ic. rar. t. 633 coll. 4 p. 143) sec. det. Gr. Symb. n. 705! N. V. f/uayacan blanco. Árbol de mediana altura en O. (Am. cal.). La madera es dura, pesada y tiene semejanza con la de Caesalpinia melanocarpa pero no tiene el corazón negro, sino amarillento ; se usa para muebles, cabos de herramien- tas y objetos torneados; parece que el tronco no se cria — 291 — muy grueso. En otras regiones de América se extrae de la corteza mía goma que se usa como flemagogo y en casos de hemorragias. Calliandra bicolor (Benth. in Hook. Journ. of Bot. II, 139) syn. Inga parvifolia (Hook. et Arn. Bot. Mise. III, p. 2(J'i). N. V. ¡lor de seda. Arbusto en E. (Bras. mer. Uruguay). PU/iecolobium scalare (Gr. Symb. n. 709). N. V. espinillo. T. J. O. Ch. (Paraguay). Árbol alto, cuya madera es sólida, dura y sirve para duelas de vasijas, etc. Enterolohium Tímbouva (Mart. Herb. fl. bras. 128; Benth. Journ. of Bot. III, 224, ic. Fl. bras. v. 15, 2, t. 121). syn. Calliandra Pacara (Gr. Symb. n. 707) !! N. V. pacará, timbó, pacard del limbo. T. Ch. O. J. Corr. (Paraguay) y cultivado á veces en otras provincias. Árbol de una altura mayor de 12 á 14 metros y tronco de un grueso notable, hasta l'/2 metro de diámetro. Las hojas son astringentes y la infusión se usa en gárgaras y para lavar llagas, úlceras y heridas. Las frutas sirven para hacer tinta. La corteza y la.s frutas machacadas y puestas en infusión con agua caliente se emplean como jabón para lavar y limpiártelas de lana y de algodón. La corteza contiene tanino y se usa en las curtiembres. La madera á pesar de no ser muy compacta, es sin embargo de buena clase, flexible y elástica; en tablas y tablones se emplea para puertas, construcción de buques, tinas de baño, palanganas, vasijas de todo género, bateas para lavar, ruedas hidráulicas y tiene muchos otros destinos mas. El olor desagradable de las aserraduras y de la madera seca tiene un efecto particular, pues hace estor- nudar á los que la trabajan. — 292 — Es un árbol muy hermoso para adorno y las estacas de sus ramas brotan con facilidad cuando se plantan. Inga uruf/uensis (Hook. Arn. Bot. Mise. III, p. 202, Ic. Benth. in Fl. bras. 15, t. 135). N. V. itigá, yngá. E. (Bras. mer., Uruguay). Árbol de 8 á 10 metros de altura. La madera no carece de solidez, pero no sirve para combustible porque se carboniza muy pronto y hace demasiado humo. La fruta contiene una resina blanca que, aplicada con algo- don en las muelas cariosas, calma el dolor. La corteza del tronco es usada en las curtiembres. Inga affinis (DC. Prod. II. p. 433, n. 15). N. V. pacay. O. (Bras.). Árbol de mediana altura cuya vainilla es comestible. La madera es semejante á la del anterior. Rosaceae. * Pruniis Pérsica (sec. Hook. et Benth. gen. t., p. 610) syn. Ámydalus pérsica (L. spec. 677) et Pérsica vuL- garis (Mili dict. n. I, DC. fl. fr. p. 487), y su varie- dad laeuis (syn. Pérsica laevis DC. fl. fr. 4, p. 487). x\. V. durazno, melocotonero, albórchigo, pavía, (los tres últimos solo en España); prisco; abridero (en España, la variedad con frutas de carne que se desprende fácilmente de la pepita). Este árbol de 6 metros de altura y 7* metro de diámetro mayor de tronco, es originario del Sudoeste de Asia; se cultiva mucho en la R. A. y se ha puesto espontáneo en muchos parajes de las pampas, sierras, etc. Las hojas (folia persicarum) son un laxante suave, diuréticas y se suministran para cálculo de la vejiga, mal de piedra, hidropesía, y las lombrices. Las flores - 293 — se usan para ñibricar un jarabe (syriipus (lorum per- sicarum) que es purgante. Las semillas tienen las mismas virtudes que las almendras amargas y se em- plean como estas para curar de lombrices, tenia, fiebres intermitentes, etc.; se hacen perfumes con el aceite volátil y venenoso que puede extraerse de ellas. La corteza del tronco es amarga, muy astringente y se ha usado con buenos resultados en casos de fiebres inter- mitentes contra la tenia. La goma que sale del tronco se usa como la goma arábiga. Es sabido que la fruta aromática y dulce es un manjar muy agradable ; se conserva secada (pelones, orejones, quesos de orejones) y se usa para hacer dulces, etc. Con las pepitas se fabrica un licor (pérsico). En las pampas de la R. A. es cultivado este árbol no solo por sus frutas sino también para servirse de su leña como combustible. * Prunus amygdalus (sec, Benth. Hook. gen. I, p. 610) syn, Amygdalus commiinis (L. spec. pl. I, 677). N. V. almendro. Árbol originario del Sud de Europa, Norte de África, Asia menor, etc.; se cultiva en algunos puntos de la R. A. Las frutas (pepitas) que son ó dulces ó amargas, son medicinales. Las almendras dulces se usan para hacer una bebida demulcente (almendrada, orchata) que se usa para las irritaciones del estómago, de los in- testinos y de las uréteres. El aceite que se extrae de ellas sirve mucho en medicina, v. gr., para emulsiones que se prescriben para las citadas enfermedades, como también para las irritaciones de los órganos respiratorios. La harina que queda como residuo después de la fabri- cación del aceite (salvado de almendra) se usa como cos- mético para lavar el cutis áspero. Es además bien cono- cido el uso que se hace de las almendras dulces, espe- — 294 — cialmente de la variedad con huesillo frágil, para hacer dulces en pastas ó en mazas, y se comen crudas y tostadas con azúcar. Las almendras amargas son venenosas y contienen una sustancia amarga cristalizable, la amigda- lina, y un aceite volátil con ácido prúsico, de las que basta una dosis pequeña para matar ratones, canarios, etc. Como remedio, son usadas para las lombrices, te- nias, fiebres intermitentes y en casos de supuración de partes internas; exteriormente, se emplean para el dolor de cabeza y del mismo modo se usa el agua que se des- tila con ellas. El aceite volátil venenoso tiene un olor agradable y sirve para la fabricación de artículos de perfumería, jabón, etc. Son también empleadas en pe- queñas cantidades para hazer mazas y pastas. Las hojas sirven para teñir color amarillo. * frunus Armeniaca (L. spec. 679), syn. Armeníaca vulgaris (Lam. dict. I, p. 2). N. V. alb arico quero. Árbol originario de Persia , xirmenia y otros países del Oriente; se cultiva en algunas regiones de la R. A., pero no con frecuencia. Las frutas son un manjar muy conocido, agradable, de buen gusto y con ellas puede fabricarse aguardiente. Las pepitas que se hallan dentro del cuesco de las frutas de una variedad dulce , se comen como las almendras dulces y contienen un aceite grasoso y tan bueno como el de estas; también se fa- brica aguardiente con ellas. El carbón del cuesco se usa para hacer tinta de China y en la pintura al oleo. La goma que sale del tronco del árbol se usa como la goma arábiga. La corteza es buena para curtir. La madera no tiene mucho valor. * Prunus domestica (L. spec. 680). N. V. ciruelo, cirolero. Árbol originario de la Europa meridional y del Oriente. — 205 - Las frutas son un manjar muy agradable y son medi- cinales como laxante suave {pulpa prunorum). Secadas, se usan como alimento dietético y sirven para fabricar una especie de aguardiente. Do las pepitas se saca un aceite grasoso de buena clase. El tronco segrega una especie de goma-resina (gummi riostras v. prunorum) que se usa en lugar de goma arábiga. La madera es de color rojizo y tiene lindas vetas, pero es quebradiza y por esto empleada solamente para objetos pe(iueños, principalmente en trabajos de torno. En la R. A., so- lamente la variedad armenioides (Ser. in DC. Prod. 11, p. 533) que tiene frutas de un color amarillo ó verdozo-amaril lento , se cultiva con alguna frecuencia bajo el n. v. de damasco] con otras variedades no se ha hecho ensnyos de cultura en escala mayor. * Prumis Ceras US (L. syst. nat. 11, 1057 excl. var. pL); var. austera (Berg, in Berg et Schmidt, Otf. Gen. I, t. IV, e.); syn. Prunus austera (Ehrli. Beitr. VII, 129). N. V. i/uindn a(j¡iu. Árbol originario del Asia menor; es á veces cultiva- da esta variedad y se halla espontánea en las sierras, V. gr., de C. Se usan las frutas agrias para hacer dulces , destilar aguardiente etc. Las pepitas contienen un aceite volátil con ácido prúsico, del que se hace uso en medicina. Tam- bién se ha hecho uso de las flores y pedúnculos de las frutas como diurético y calmante en casos de catarros. Del jugo de las frutas se hace una especie de vino. La madera es firme , con lindas vetas , y se emplea para muebles, etc. * Prunus Cerasus aríuin (L. spec. 679); syn. Cerasus avium (Moench. meth. 672); var. a. sijlvestris (Ser. in DC. Prod. II. p. 535). N. V. guindo dulce, cerezo negro. Bol. Acad. IV. 20 — 296 — Árbol originario de Europn, del Asia menor, etc. Se cultiva mas raras veces que el anterior en algunas re- giones de la R. A., v. gr., C. Sus frutas son dulces y de buen gusto, se comen crudas, en dulces, etc. En Suiza se destila de ellas un aguardiente (Kirsch), que contiene ácido prúsico (cianhídrico) que se ex- trae de las semillas, las que también contienen un aceite grasoso y otro volátil. En medicina es usada la aqua cera- sorum nif/roruní y el jarabe que se hace de ellas. La go- ma que se derama del tronco sirve para la fabricación de telas de algodón pintadas. La corteza interna (floema) se emplea para fiebres intermitentes; la parte blanda de ella se (3orta y se pone entre el tabaco para aromati- zarle y, para el mismo fin, sirve en Suiza el decoctado de las hojas. La madera firme y de vetas lindas se em- plea para nuiebles, etc. * Prunus Lauro-Ccrasus (L. spec. 678); syn. Cerasns Lanro- Cerasus (Lois. in Duham ed, nov. 5 p. 6). N. V. laurel cerezo. Árbol originario del Asia menor. Se cultiva raras ve- ces en la R. A., v. gr. en C. Sus hojas (folia Laiiro-Cerosi) son oficinales y contienen un aceiie volátil que es muy venenoso, á causa de su contenido de ácido cianhídrico. Con ellas se destila el agua de laurel ceve'io (aqn a La uro-Cerasi) que se emplea como remedio calmante en muchas enfermedades. Las frutas dulces son comestibles y se usan en el Oriente, etc., para fabricar una bebida alcohólica (ratafia). * Kerria japónica (ÜG. trans. Linn. soc. 12, p. 156). Arbusto originario de la China y del Japón ; se le cul- tiva en jardines, v. gr.. en C. En el .lapon, se usan las hojas en medicina y las fibras sirven para hacer tejidos. — 297 — Kageneckía oblonya (Ruiz et Pav. fl. per. syst. 239). Sierras de T. (Chile). Arbusto ó árbol de 4 á 5 metros de altura. Kageneckia lanceolata (liuiz et Pav. tí. per. syst. 290). Árbol ó arbusto pequeño en las sierras de 0. (Perú) que llega hasta 4 metros de altura y su tronco á 15 centímetros de diámetro. Las hojas amargas se usan (en el Perú) como febrífugo y son eméticas. La madera es de buena calidad, sirve para diversos trabajos, como cabos de herramientas, etc. Rubus f/coides (íSmith. ic. ined. t. 19); syn. Daliharda geoides (Pers. ench. 2, p. 53). Yerba que se cria en el estrecho de Magallanes, Pa- tagonia (y el Sud de Chile). La fruta se come y tiene uu gusto agradable. * Riibiis Idaeus (L. spec. 706). N. v. frambuesa, sangüeso. Arl)usto originario de Europa y del Norte de Asia, que se cultiva á veces en la R. A. La fruta aromática se come y es un manjar refrescante y muy agradable. El jarabe (sgrupus Rubi Idaei) que se hace con la fruta es usado en medicina para dar buen gusto á ciertos remedios y, con agua, se toma como re- fresco. El vinagre fabricado con la fruta se emplea para las enfermedades biliosas y el escorbuto. Se han empleado las hojas, que son astringentes, para diarreas, almorranas, etc., como igualmente para tomarlas como té en infusión; también se puede hacer uso de ellas en las curtiembres para curtir cueros finos. * Rubus discoLor (Weilie et Nees, Rub. Germ. t. 20; Chauí. et Schlecht. in Linnaea II, 12). N. V. zarza-mora, zarza. Cultivado en E. T. (seg. Tweedie). Arbusto originario de Europa; tiene frutas comestibles de - 298 — uxctíloute gusto (jue se usan en medicina como Jas de Riihiis ¡(laeus y de algunas otras especies mas; tienen propiedades diuréticas y se dan especialmente á. los enfermos de hidro- pesía. Las flores, las hojas y los brotes nuevos se usan como astringentes en diarreas, etc. El jugo de las frutas sirve para teñir el vino y los cabellos. Rabas iinperialls (Cham. Schlecht. iu Linnaea II, 13). N. V. zarza-inora, zarza. Arbusto silvestre en las sierras de C. T. S. J. (Brasil), La fruta (!S comestible, pero es de calidad mas in- ferior (pie las de sus aliados europeos, v. gr. R. frati- cDsas, (li.scilnr, etc. La infusión de los brotes y flores nuevitas puede usarse como astringente en casos de diarreas, almorranas, etc. ^ Frotar ¡a vesca (L, spec. 7ll5). N. V. friií'dld, fresa. Se cultiva en las quintas de nmclios parajes de la lí,. A. Las frutas son comestibles, de buen gusto y se comen crudas y en dulces, etc. Sus raices tienen pro- piedades tónicas, astringentes y diuréticas. Fragaria, cliilcnsis (Ehrh. beitz. 7, p. 26); y su varie- dal Ríaiariensis (F. Bonariensis Juss. herb. ex i'ers. ench. 2. p. 58). N. v. fratilla de C/iilc (los indios de Chile la lla- man ifa(i¿t//icn ó lláliaen). BA. (V; P. (Chile, Uruguay) y es cultivada en quintas. Ycr'oa fpio tiene frutas relativamente grandes en com- paración con las de la anterior; son comestibles y de gusto muy aromático y agradable. El cocimiento del cáliz y la infiisiou hecha con él se han usado para el cólera. La raiz es astringente y se emplea en ca- sos de diarreas, disenterias y gonorreas, administrando su agua en forma de lavativas é inyecciones y toman" dola interiormente. — 299 - Alchemiila pinnata (Riiiz et Pav. fl. per. I, p. 69). N. V. algarrohilla de la sierra. Sierras altas de C. Ct. R. T., etc. Esta yerba pequeña es un pasto muy alimenticio, espe- cialmente para las ovejas, y su nombre vulgar proviene de que engordan tanto los animales que con ella se alimentan como los que comen las frutas de ciertas espe- cies de Acacia y Prosopis, (^ue llevan el mismo nombre. Manjijricarpus setosus (Ruiz et Pav. fl. per. I, p. 28, f., t. 8, f. d.). N. V. perlilLa, pedia, (C. Ct.), yerba de perdiz, (E.) savinilla, (en Chile), Inambú-caá (P.). Arbusto pequeño de apenas 20 centímetros de altura en las sierras y los llanos de P. BA. E. M. C. SL. T. Ct. R., etc. (Chile, Bolivia, Perú, Ecuador). En la R. A. se usa con o astringente leve para curar la gonorrea, las almorranas, etc., y el té de la planta hervida con raíz pasa por im buen febrífugo, carmina- tivo purgante y aperitivo, y se preconiza mucho para las vías urinarias. Las frutas tienen un cáliz blanco, lustroso y carnoso que es comestible, razón por la que son bus- cad; s por las perdices. Margyricarpus alal.ns (Gilí, in Hook. Bot. Mise. III, oOo); syn. Tetrai/lochi)) stiirtus (Poepp. Frag. synops. pl. ph. 26, Wedd. Chl. and. t. 77). N. V. perliUa. Arl)usto pequeño de 20 á 25 centíuietros de altura en ¡as Cordilleras de R. Ct. (Chile, Bolivia). Los viajeros que pasan la Cordillera tienen, á falta dr otra, que apro- vechar su leña en ciertos parajes. S? usa como el ante- rioi- en la medicina popular. Acaena pinnatifida (R. P. fl. per. I, p. 68. t. 104, f. 1 b.). N. V. cadilla, en Chile, airior seco y pimpinela cimarrona también. - 300 - P. BA. C. T. y otras provincias mas (Chile). La infusión de las hojas de esta yerba se usa como astringente suave para curar y lavar heridas y para in- yecciones en casos degonorréas. Se usan igualmente cata- plasmas hechas con las hojas trituradas para úlceras sifilíticas y heridas. Polylepis racemosa (R. P. syst. I, p. 139). N. V. tahaquilLo, quenua, queñua, queñura. En las sierras altas de C. T. O. (BoUvia. Perú). Árbol mediano (jue se eleva hasta 6 metros de altura y cuyo diámetro del tronco tiene hasta Vs metro. Los indígenas de algunas comarcas de las sierras usan las láminas de la corteza (periderma), que se desprenden del tronco en forma de hojas finas y delgadas, para envolver el tabaco y hacer cigarrillos. De la madera se hacen cucharas en la sierra y es empleada en la cons- trucción de ranchos, etc. * Rosa ceMi folia (L. spec. 704. DO. Prod. 11. p. 619) con muchas variedades. N. V. rosa, cen ti folia. Esta y otras especies mas se cultivan á veces en los jardines, cercos de quintas, etc. Las hojas florales (pétalos) de las rosas son astringentes suaves; se usan frescas y desecadas ó también en ensa- lada, mientras que la infusión de los pétalos frescos, como igualmente el jarabe que con ellos se fnbrica es purgante. Los antiguos Romanos y Griegos han hecho uso de ellas en muchas enfermedades; solo raras veces se usan ahora interiormente (como estomacal y corroborante de los in- testinos); mas frecuente es su uso exterior para gargaris- mos, aguas oftálmicas y restauradoras de la belleza, para miel de rosas en las aftas de los párvulos, ungüentos para los labios, almorranas, inñamacion de los pezones de los pechos, de los ojos, etc. Se las usa. además para, aro- — 301 - matizar el tabaco, especialmente el rapé, y para la íabricacioa de un licor y de pastillas. El precioso aceite de rosas se extrae especialmente en el Oriente y las In- dias Orientales de las flores de * Rosa Moscliaki (Mili. dict. n. 13) y * /?. damascena (Mili. dict. n. 15), pero también de las de * R. cc/Ul folia (L.). * Pijrus communis (L. spec. 68G); con algunas variedades. N. V. peral. Árbol conocido que alcanza á una altura de 25 me- tros; es originario del Sud de Europa y de Asia y se cultiva desde tiempos remotos en Euj'opa, etc., á causa de sus frutas de las (|ue los hortelanos distinguen un gran número de variedades diversas. En la R. A. su cultura no se ha propagado hasta ahora suficientemente como lo merece y solo se cultivan generalmente varie- dades con frutas pequeñas y no de clase superior, v. gr. en BA. SF. E. C. M. Es muy sabido que las frutas de diversas variedades se comen crudas, cocidas ó en forma de «dulce». Puede además fabricarse con ellas arrope y una especie de vino, llamado cidra. La madera es pe- sada, dura y es empleada por los torneros. * Pyrus Malus (L. spec. 6^6); con algunas variedades. N. V. manzano. Árbol de mediana nltura (ahianza hasta 10 metros), originario de Europa y muy conocido por la utilidad de sus frutas, de las que existen muchns variedades. Es cultivado en todas las regiones de la R. A. que gozan de un clima que no es demasiado cálido y se le encuen- tra frecuentemente espontáneo en muchos valles de las cordilleras de P. (como también del Sud de Chile). La fruta se come cruda ó cocida, como pasa, etc., y con ella se fabrica una bebid i fermentada (chicha de man- zanas) y una especie de vino cidra. Las variedades de las frutas de gusto agrio contienen el ácido málico y son ~ 302 — empleadas para la fabricación del malato de hierro que es remedio contra la clorosis. * Pijriis Cydonía (L. spec. 687); syn. Cijdonia vulgaris (Pers. ench. 2, p. 40). N. V. membrillo común. Árbol bajo ó arbusto de apenas 6 metros de altura, originario de la Europa meridional y cultivado en mu- chas regiones de la R. A. Las frutas crudas no son de buen gusto pero se comen cocidas y en dulces. Las se- millas son muy mucilaginosas y su decoctado es empleado en medicina (íiiucilaíjo seminum cydoniorum). * Pyrus germánica fsec. Benth. Hook. gen. I, p. 626); syn. Mespüus germánica (L. sp. 684). N, V. níspero verdadero. Arbusto de próximamente 3 metros de altura, originario de Alemania, etc. Sus frutas pueden comerse crudas cuando principian á ablandarse y descomponerse. Se cultiva raras veces y solo en las quintas de algunos puntos de la R. A. ^ Photinia japónica (sec. Benth. Hook. gen. 1,627); syn. Kriohotrya japónica (Lindl. trans. Ihm. soc. 13, p. 102). N. V. níspero del Japón. Arbolillo originario del Japón y de la China, con frutas comestibles. Su cultura que es frecuente en las partes cálidas de la América meridional es poco esparcida en la R. A. Saxifrageae. Escallonía myrtilloides (L. lil. suppl. 156; Smith. ic. ined. ir, t. 30; Wedd. Chlor. And. t. 71, B.). Arbusto en las sierras de S. O. (Cordilleras de Nueva Granada, Ecuador, Perú, Bolivia, Venezuela). Los hoj'ts amargas y aromáticas se emplean exteri'v/- mente en Colombia para las contusiones, fracturas de — 303 — ñuesos, etc. La madera dura y rosada tiene diferentes aplicaciones para objetos pequeños torneados. Wemmannia pon llini folia (Pohl, in litt. ad DC. Ser. in DC. Prod. IV, 11 ex Ic. Engler in Fl. bras. lase. 54, t. 40, f. 2, et t. 38, f. 14—16). N. V. ta/íco. Árbol de R á 10 metros de altura en las selvas de O. J. We¿inii(/iiiiL/( (nr/ancnsis (Gardn. in Hook. Lond. Journ. IV, 104, ex ic. in Fl. bras. fase. 54, t. 40, f. 2). N. V. tarco. Árbol de 8 á 10 metros de altura en los montes de J. O. (Bras.). La madera de las especies mencionadas es de buena clase y sirve para muebles, etc. Coiii bretaceae. Terniiiwlla australis (Canil), in St. Hil. Fl. bras. mer. II, 173, ic. t. 128). N. V. amarillo; palo amarillo. Árbol pequeño ó arbusto de hasta 4 metros de altura en E. (Bras. mer. Urug.). La madera es buena, para varios trabajos, combustible y para hacer carbón, pero el tronco no se cria grueso. La corteza es astringente y contiene tanino. Cluoncoa triflora (Gr. Symb. n. 779). N. V. palo arnarillo ; lanza amarilla; polo de lanza amarilla. Árbol que tiene hasta 12 metros de altura y mas de V2 metro de diámetro de tronco, es característico para los montes de T. O. 8. J. Ch. Su madera amarilla sirve para postes de cercos, mue- bles pequeños y sencillos, como ser sillas, etc.; se hace además uso de ella para ejes de carreta y carretillas, cabos de lanzas para los soldados (uso que le ha hecho — 304 — dar el nombre vulgar con que es mas conocido). Es un buen combustible y es estimada para hacer carbón. Myrtaceae. * Eucnlyptus globulus (Labill. voy. I, p. 15B, t. 13; nov. hoU. 2, p. 121). N. V. eucalipto, r/omern azul, (hlue ¡/uintrec en Nueva-Holanda) . Árbol originario de Tasmania y Nueva-Holanda meri- dional, cuya cultura se ha introducido desde relativamente poco tiempo en la R. A., pero está ya considerablemente esparcida y ha dado los mejores resultados en las pro- vincias del Litoral. No se cria bien en las provincias del Poniente que tienen un clima demasiado seco: Alcanza generalmente á una altura de 60 á 70 metros, algunas, pero raras veces, hasta 100 metros; crece derecho y se cria muy lijero. Su madera es pesada, dura y de mucha utilidad; expuesta al aire, su consistencia aumenta todavía, coagulándose entonces las resinas que contiene. A mas de que estas resinas endurecen, la ponen en condiciones de resistir por mucho tiempo á las influencias de la humedad; no se pudre ni aun debajo de agua y tampoco la atacan los insectos. En Nueva-Holanda, la usan con preferencia para trabajos hidráulicos y sirve para toda clase de construcciones, etc. Para poder crecer, este árbol necesita mucha agua y es por esto que los mejores resultados obtenidos han sido siempre en los territorios húmedos; ha servido aún como medio para secar cena- gales, marjales, etc., y con él se ha conseguido cambiar en regiones sanas, parajes malsanos donde reinaban fiebres intermitentes y otras enfermedades. Los resultados (jue en este sentido ha dado en la África setentrional son muy conocidos. La corteza aromática de los gajos mas nuevos, las ho- jas dimorfas y las frutas se usan para especie. Una esencia — 305 — preparada por medio de simple destilación de las hojas y de la corteza se ha recomendado para el asma, la tos, los pasmos y las afecciones convulsivas del pulmón; es ade. más diurética 3^ empleada en catarros de la vejiga, fiebres de todas clases, reumatismos crónicos, gota, etc. A más de la esencia, se usa en medicina el polvo de las hojas, el extracto alcohólico, etc. Recomiendo á los que quieran hacer un estudio mas completo sol)re el valor medicinal é industrial de este árbol, la lectura del folleto del Dr. Gimliert: L'Eucaliptus globulus, son importance en agri- culture. en hygiene et en médecine "(Paris 1870). Feijoa Sellowiana (Berg. in Fl. bras. fase. 18, p. 615); syn. Orthostemon Sellowianiis (Bg in Fl. bras. fase. 18, p. 467, t. 7, fig. 158 et t. 54). N. V. arralan ó ijuayava. E. (Urug. Bras. mer.) Árbol de 3 á 6 metros de altura. Las frutas se comen. La madera es de buena clase. * Psidiion G'uaiava (Radd. mem. 1821, p. 2); var. 'pi/ri- ferum (Radd. 1. c), syn. P. pyriferum (L. sp. 672); et pomiferum (Radd. 1. c), s^m. P. pomiferum (L. spec. 672). N. V. y u aljaba, guayava, arasay. Se cultiva este arbusto en S. J. O. ; es originario de la América tropical. Las frutas maduras, relativamente grandes, amarillas y en forma de pera, forman un manjar agradable y se comen crudas y en dulces. Las frutas no maduras son astringentes y se usan en casos de diarreas y de disen- teria; las hojas, las raices y la corteza han sido también medicinales y usadas como tónico astringente. La última es empleada en los trópicos para las curtiembres y la fabrica- ción de papel ; las yemas nuevitas se usan para gargarismos y el jugo de los troncos nuevos para purificar el azúcar. — 306 — Mtjrlus mucronata (Camb. in St. Hil. Fl. bras. mer. II. 211, t. lil; Berg. in Fl. bras. fase. IR, p. 416). E. (Bras. mer. Urug.) y var. Thea (Gr. Symb. sub. ii. 739); syn. Psidium Thea (Pl. Lor. n. 2^7). C. T. Sgo. N. V. alpainatu (C), arazao y (juabíroba (E.). Arbusto bajo de V» á '/^ metro de altura,. Las hojas aromáticHS se tomnu en el mate, en infusión teiforme y se usan para la fabricación de una clase de licor. Las frutas del tamaño de la uva moscatel son de nuiy buen paladar y se comen. Myrtiis incana (Bg. in Fl. bras. fase. 18, p. 416, t. 6, fig. 126 ot t. 45). N. V. arazá ó ara-ni, arazá f/uazíi. E. (Bras. mer.). Arbusto bajo. Sus frutas se comen crudas y cocidas y de ellas se hacen ricos dulces y jaleas. La raíz y las frutas verdes se emplean para tisanas astringentes. Las hojas son vulnerarias y resolutivas y se emplean para baños contra enfermedades de la piel; también son usadas para fabricar un licor estomacal. La corteza contiene tanino y sirve para curtir. Blepharocalix cisplatensis (Gr. Symb. n. 737); syn. Eu- genia cisplatensis (a. Camb. in St. Hil. Fl. bras. mer. II, p. 246, ic. t. 151.). N. V. lapachiUo, guayavo, arrayan. E. Corr. Ch. (Parag. Bras. mer. Urug.). Árbol de mediana altura. Posee (según Parodi ensay. Bot. med. Arg. p. (S4) propiedades tónico-astringentes y puede sustituirse al mirto {Mijrtus co^ninunis) en los raros casos en que este es usado. La fruta es comestible. La madera es buena para rayos de carros, como leña de quemar y para hacer carbón. — 807 — Blepharocalu' Tweedii (Brg. in Fl. bras. fase. 18. p. 429); syn. Eugenia Tweedii (Hook. et Arn. iii Hook. Bot. Miso. III, p. 323). N. V. inirtCj imilta. E. (Urug.). Arbusto de 2 á 3 metros de altura, cuyo tronco no se cria muy grueso, pero dá buena leña y sirve para hacer carbón. Tiene quizás las mismas propiedades que la especie anterior. Eui/cniü ¡inijloni (L. ex det. Gr. Pl. Lor. n. 285 et Symb. n. 728). N. V. an-üijun. Árbol de hasta 10 metros de altura ó arbusto en T. J. S. O. Parag. Eras.). Su tronco tiene 7* á V^ metro de diámetro. Sus hojas siempre verdes poseen cierto aroma y de ellas se ha heclio uso en infusión teiforme para tomar en el mate, como también para aromatizar el aguardiente y la caña y para la fabricación de un licor. Las frutas, de un color azulado-negro y tamaño de una guinda, se comen y tienen el mismo aroma de las hojas. La madera es muy dura y se ocupa para varas, soleras y latas para techos de pnja, cabos de hernunientas y estacas de cai-- retas. Es además la mejor madera conocida en las pro- vincias del Norte de la K. A. para estaquillas de clavar calzado. Eugenia Lif/uslrina (Willd. spec. 2, p. 962); syn. Sícno- cnly.r ¿igustrinus (Berg. in Fl. bras. fase. 18, p. 343.). Arbusto ó árbol de 3 á 4 metros de altura en E. (Am. cal .). Las frutas se comen. De la corteza se hace estopa para calafatear los buques. La madera es muy ñrme y es usada para la construcción de buípies. Eugenia liyemalis (Camb. in St. Hil. Fl. Bras. mer. II, p. 259.). — 308 — A.rbusto de 1 á 1 7-2 inetio de altura en E. (Bras. mer.). Su tronco constituye un buen combustible. Eugenia Mato (Gr. Symb. n. 731, non Pl. Lor., quae ex spec. auth. fn. 485] a beat. Lorentz coll. in Herb. Mus. Univ. Cord. conservatis est E. uniflorae varietas). N. V. malo. T. (sierra). Árbol mediano de 6 metros de altura mayor, cuyo tronco tiene un diámetro de hasta 7^ metro. La fruta es agradable al paladar y se come. Su madera se em- plea para construcción de casas y ranchos y es un buen combustible. Eugenia pungens (Berg. in Fl. bras. fase. J8, l,p. 2-24); syn. Eugenia Ibávigú (Parodi ens. bot. med. Arg. p. 84) V N. V. mato (T. O.); ibá-viga (trad. fruta vellosa) (Corr.)? E. T. O. S. J. Ch. Corr. (Bras. mer.). Árbol elevado de hasta 10 metros de altura, crece de- recho y su tronco tiene hasta ^¡-i metro de diámetro. La fruta tiene un sabor agradable y es buena para comer. La madera, de hndo color, es sólida, y se ocupa para muebles, soleras, cumbreras, varas de techos de ranchos, etc.; es un buen combustible. Eugenia uruguensis (Canib. in St. Hil. Fl. Bras. mer. II, p. 261). Arbusto de 2 á 2 7^ metros de altura en E. (Bras. mer., Parag.). Eugenia multiflora (Camb. in St. Hil. Fl. Bras. mer. II, p. 260). Arbusto de 2 á 2 '/^ metros de altura en E. (Bras. mer., Parag.). Eug 'nía glavxescens (Camb. in St. Hil. Fl. Bras. mer. li, p. 266, t. 154). - 309 — Arbusto alto en E. Corr. (Uriíg. Parag. Bras. iiier.). Las tres últimas especies no tienen troncos muy grue- sos, pero buena madera, especialmente como combustible. Eugenia edulis (Benth. Hook. gen. I p. 715); syn. J///r- cianthes edulis (Berg. in Fl. bras. lase. 18, p. 353). N. V. ubajay. E. Corr. (Urug.). Árbol silvestre y cultivado de tí á 8 metros de altura. L'i fruta, del tamaño de una manzana y de color ama- rillo, tiene un sabor ngrio-dulce, se come y es usada para la fabricación de vinagre. La madera del árbol es fuerte, Arme, y se usa especialmente en la fabricación de carros, carretas y otros trabajos de carpintería. * Púnica Granatum (L. sp. 676). N. V. granado. Arbolillo originario del Norte de África que se cultiva á veces en la K. A. Antes, se ha hecho uso en medicina do casi todas las partes de esta planta; ahora, en las oficinas, solo se en- cuentra la corteza de la raíz, que es un remedio que contiene una sustancia dulce, la granatina y un principio acre; es muy eficaz contia las lombrices. Las flores (cy- tini ó balaustia) son astringentes y se usaban contra la dia- rrea. Se acostumbraba emplear las hojas para confeccio- nar cataplasmas usados para inflamaciones y úlceras; interiormente, obran contra flores blanc;is. El jugo de las frutas era considerado como antiemético. La fruta es un manjar agradable y sirve para fabricar una especie de vino. Las pepitas se usan igualmente en Java contra lombrices, disenteria y diarreas. La corteza y las cascaras de las frutas sirven [:)ara curtir y las flores para teñir negro. La madera es buena para fabricar objetos pequeños, peines, etc. — 310 - Lythai'ieae. Ciiphea racemosa (Spreng syst. 2, p. 455. excl. spec. jam.); syii, C. spicata (Cav. icón. 4, p. 5G, t. 3^1) et C. campylocentra (Gr. Syinb. n. 756 e. p. sec. el. K(»hne iii litt.). BA. E. Cuphea fruHcosa (Spreng. nene entd. 2, p. 15(J); syn. C. liyustrina (Cham. et Schlecht. Linnaea II, p. 359). BA. E. Corr. (ürug. Bras. mer.). Cuphea mesaste i non (Kuhne in litt.) syn. C. kyssopifolia (Gr. Pl. Lor. et Symb. e. p. non Kunth, in H. B. nov. gen. 6, p. rJ9). T. (sierra). Cuphea glutinosa (Cliani. et Schlecht. Linuaea II, 369) syn. C. hyssopifolia (Gr. Pl. Lor. n. 293, y Synib. n. 754 e. p., non Kunth 1. c. sec. el. Kühne in litt.) P. BA. E. C. Cuphea cauípijLocenlra (Gr. Symb. n. 756, emend. a el. Kohno). E. N. V. de lits cinco yerbas citadas: sanguinaria ó siete san¡/rias. Se usa la infusión teiforme de ellas como diurético, purgante y depurativo de la sangre. Lijtliruní Htjssopifolia (L. spec. 642). BA. C. (Uruguay). En Europa se ha usado esta yerba cosmopolita como vulneraria, antiescorbútica y laxante. Resaca salicifolia (Kth. in H. B. nov. gen. am. 6, p. 192), syn. Heimia salicifolia (Lk. et Ott. abb. ber. 63). N. V. quiebra-arado. Yerba perenne común en toda la R. A. Su nombre vulgar deriva de sus raíces gruesas que - 311 — impiden al arado entrar en Ja tierra y no se dejan extir- par íácilmente de ciertos territorios en los que es frecuente esta planta. La yerba y la raíz se usan como vulnerario y se les atribuye propiedades laxantes y diuréticas. Haciendo triturar las ramas verdes y echándolas en aguas sucias, quedan estas purificadas. Onagrai'leae. Jus'siaea repens (L. mant. 381). N. V. duraznillo del agua. YerlDa acuática común en toda la K. A. Las hojas trituradas con aceite de castor {oleuin Ricini) se usan en el Asia tiopical contra la escara y tina de la cabeza. En la R. A. se usa la yerba como vulnerario en cataplasmas para heridas y su infusión para lavar estas. Jussiaea oclonerv'to (Lam, dict. .'i, p. 3j"2). E. O. (Am. cal.). En las Antillas se usa esta yerba como vulnerario, emoliente y astringente suave, principalmente en casos de inflamación de los ojos. Jussiaea peruviana (L. spec. 555). N. V. duraznillo del agua. Ct. T. (Am. mer.). Se usa en el Perú como remedio emoliente y estergente contra úlceras, especialmente las de las glándulas. Oenolhera acnulis (Cav. ic. 4, p, 68, t. 399) b. niajor (Ser. in DC. Prod. III, p. 49); syn. Oenathera grandi- flora (Ruiz et Pav. fl. per. 3, t. 318, í. 6). E. Sgo. (Chile). Oenothera longiflorn (Jacq. hort. t. 172). C. T. (Chile, Bras. mer. Urug.). y la variedad Berteriana (Spach, nouv. Ann. Mus. IV, 343). Ct. (Chile). Bul. Acad. IV. 21 — 312 — üenothera 'mollissima (L. spec. 492). BA. E. C. T. (Chile). Oenothera odoiala (Jacq. coll. o, p. 107). P. BA. Oenotliera affinis (Carnb. in St. Hil. Fl. Bras. mer. II, 269.). E. O. (Bras.). Oenothera strlcta (Led(?b. in Lk. Enum. I, 377, sec. det. Gr. Syinb. n. 769). C. T. (Bras. mer. Chile). Oenothera catharinensi.s (Caiiib. in St. Hil. Fl. Bras. mer. II, 270). E. (Bras. mer.). Oenothera indecora (Camb. in St. Hil. Fl. Bras. mer. II, p. 268). C. (Bras. mer.). Oenothera lasiocarpa (Gr. Pl. Lor. n. 301). Ct. T. S. Oenothera nana (Gr. Pl. Lor. n. 302). Ct. Los campesinos dan diversos nombres vulgares á las especies citadas y otras mas del mismo género que se encuentran en diversos parajes de la R. A.; estas deno- minaciones inconstantes y sacadas en parte de otras yer- bas son: suspiro, jlor de la oración, [lor de San José, mote-yuyo, inatutina caña, jlor de la noche, Don Diego de la noche, etc. Estas plantas se usan como vulnerarios; con el decoc- tado de las yerbas se lavan heridas y se pone también sobre estas la yerba triturada en forma de cataplasmas. Gaura aust ralis (Gr. Sj'mb. 774.). N. V. mote-yuyo. G. — 313 — Se usa esta yerba de la misma manera que las espe- cies citadas de Oenothera. Loaseae. Mentzelia albescens (Beiith. Hook. gen. I, 804); syn. iJar- tonia albescens (Gilí, ex Arn. in Ed. Journ. Nat. and Geogr. Science May 1831, p. 273); et Bartonia sinnata (Prl. Reliq. Haenk. IJ, p. 38). N. V. pcg ajera. P. M. C. (Chile). Mentzdia ddlensis (Gay, liist. Cliil. bot. II, p. 431). N. V. pegajo-a. C. Ct. S. ((Jhile). Las yerbas mencionadas tienen en sus hojas, tallos, n'utas, etc., pelos en forma de ancla y que son dotadas de protuberancias de la membrana que tienen forma de calcañar. Por medio de estos pelos las yerbas se pegan fácilmente en los vestidos de los hombres, cueros de animales lanares, etc., de los que no es fácil desprenderlas; son pues perjudiciales á la venta de la lana de los lugares donde se crian en abundancia. Loasa hibiscifolia (Gr. Symb. n. 820). T. (sierra). Loasa muralis (Gr. Pl. Lor. n. 324). BA. C. Loasa coronaki (Gilí, ex Arn, in Ed, Journ. Nat. and Geogr. Science May 1831, p. 274) syn. Caíophora coro- nata (Hook. Arn. Bot. Mise. III, p. 327). M. Ct. (Chile). Loasa licptarncra (Wedd. Chl. and. II, p. 218). Ct. (cordillera), (BoHvia). Loasa cliUijnUcnsis (Meyen, Beise um die Erde I, 483; Walp. in Nov. act. acad. Caes. Leop. Car. XIX suppl. 1,339). S. (Cordillera), (Perú, Solivia). — 814 — Hlninenbachia nuilli/ldd (Hüok. Ic. Bot. mag. t. 8599). BA. C. (sierra), (Ghile). lilii incnhdchia coiikirta (sec. Beuth. Hook. gen. I, p. 805) syn. Caiopliora coit tarta (Prsl. Keliq. Haenk. 11 p. 42) et Loasa cunlortd (Lam. Dict. III, p. 579). Gt. T. (Bolivia, Perú). Bliniienhiichia latcrttia (sec. Benth. Hook. gen. I, p. 8Ü5). syn. Ijídsa later'dia (Gi)l. gx Arn. in Ed. Journ. Nat. and (ieogr. Science, May Hol, p. 275). T. S. O. (Chile). liíiniiciilxicliia ccnina ((ir. l'l. Lor. n. 329). C. Ct. Todas las especies mencion-idas de Loasa y fíliDnen- hutibki llevan el nondjre vulgar de ürtij/a (en Chile algunas dtí eilas: i)iii;/(( nidclio ú nrtiija hraua) y pueden usarse pava la urticacion del mismo modo que las verdaderas ortigas (especies de Urtico), debido á sus pelos quemantes. Turneracea. Ttirnera uLiiUfolía (J^. spec. ed. I, p. 965). O. (Am. cal.). Se hace uso de la raíz como denuücente empleándola en infusión como el té. Passifloreae. Pasíiipnra iituri folia {Míistv.Fl bras. 13, 1, [fase. 57j p.555). N. V. pasionaria üc hoja de innral. T. S. La infusión de las hojas se usa como té y se toma en el mate. Passi/Iora cocrulea (L. am. p. 231, t. 10, f. 20). N. V. pasionaria, pasi/lora, fior cíe la pasión, ni¡>a- racayá y hrucaij/i (Corr. E.). las frutas granadillas. E. Corr S. O. J. C. (en C. quizás no indígena), (Bras. mer. Urug. Parag.). — 315 — Enredadera que se cultiva también como planta de adorno debido á sus lindas flores. Las frutas se comen crudas ó cocidas en la comida llamada puchero y con ellas se fabrican un almíbar y una bebida refrescante que se usa en la ictericia y contra el escorbuto. La infusión de la raíz se administra en los casos de sustos, contusiones, caídas, loml)rices, etc. íSe pretende (pie el jarabe de la raíz es bueno para la pul- monía. Las hojas se consideran como vermífugas. La planta contiene una sustancia particular, la pasíjlorina, de propiedades parecidas á las de la morfina. ''(issi flora Monreana (Hook. Bot. Mag. t. :)77;3). N. V. pasionaria, pasiflora, flor de la pasión, las frutas granadillas. C. La fruta es comestible y puede servir como la de la especie anterior. Contiene también, quizás, pasifiorina y la raíz puede usarse en los mismos casos que la de aquella. Passiflora fuetida (Cav. diss. 10, t. 289). N. V. pasionarin hedionda. C. S. (zona tórrida). La yerba de esta enredadera que se arrastra por el suelo, es usada para ])arios y como tópico contra las afecciones del cutis, eiisipela. etc. La raíz tiene propie- dades emenaiíogas y antihistéricas. Las flores son pec- torales y las frutas comestibles. Tacsonia nnihilicata (Gr. Pl. Lor. n. 319). N. V. i/ranadilla. R. Ct. (Cordillera). Las fi'utas se comen y son usadi.'S coiiio las d(> Passi- flora coerulca. * Carica Papaya (L. spec. 1466 excl. div. syn.) syn. Papaya valyaris (UC in Lam. dict. 5, p. 2). — 316 — N. V. papayo, '))wmün, árbol de melón, pinó-guazú. Árbol mediocre de 5 á 7 metros de aitura, originario de las regiones tropicales de Siid-América, se cultiva en O. y Corr. Las frutas carnosas tienen la forma y el tamaño de un melón mediano, su gusto es dulce y se comen crudas, cocidas y hechas dulce, pero la fruta cruda produce fácilmente diarrea. El jugo lechoso es amargo y áspero; se usa, mezclado con miel, como )m remedio excelente contra las lombrices, y se emploíi exteriormente en las enfermedades del cutis. Las semillas so usan también contra lombrices. La raíz tiene un olor semejante al del rábano negro; tomada en pequeñas dosis es antihel- mínticn, pero es peligrosa en dosis mayor; administrada exteriormente produce empeines, é interiormente, infla- mación de los intestinos. Las hojas son empleadas para envolver la carne de animales viejos y producen el singLÜar electo de ablandarla. El mismo efecto se con- sigue si se ponen algunas gotas del jugo lechoso en el agua donde se sumerge la can^e. Los negros emplean también las hojas como jabón. Con el tronco ahuecado se hacen canales ó tejas para recojer las aguas llovedizas. Carica queirífolia (Benth. Hook. gen. I, p. 815); syn. VasconceWa quercifolia (St. Hil. 2" mém. Réséd. p. 12). N. V. hiduera del monte, higaerUa. Ct. T. (Bras. mer.). Árbol de 6 á 8 metros de altura. Carica í/ossi/pifolia (Gr. Syinb. n. 814). N. V. higuera del monte. O. Carica lanccnlala (Benth. Hook. gen. I, p. 815) syn. Vasconcellia lanceolata (A. DO. Prod. XV. 1. 416). N. V. higuera del monte. S. J. (Perú, Bolivia). — 317 - Árbol (le 5 á 7 metros de altura. Las frutas de las tres especies citadas son comestibles. La madera es muy acuosa, blanda é inservible. La lecbe que contienen las ramas nue^^as, hojas y raíces tiene las mismas propiedades que la de Cariat Papaya. Cuciirbltaceae. * Lagenaria viUgarís (Ser. in DC. Prod. III, p. 299) syn. Cucamis Lagenaiua (L. spec. 1434). N. V. calabaza, yerúa. Eiu'edadera originaria de la India Oriental (?); se cul- tiva en algunas partes de T. Sgo. S. O. Corr. y se halla espontánea en ciertas regiones del Noite de la R. A. Las semillas *se han usado en medicina para fabricar bebidas demulcentes aconsejadas especialmente para en- fermedades de la uretra, vejiga, etc. En la India Orien- tal se emplean las hojas contra la ictericia y el jugo fresco de ellas contra el asma; la carne de las frutas se emplea en la India occidental contra inflamaciones de los ojos, y en el Brasil es usada como purgante drástico. Las cascaras excavadas de las frutas de tamaños muy diversos, sirven de mates ó de botellas, para conservar pimienta, ají molido, etc. Hay ciertas variedades de las que las frutas verdes pueden comerse á pesar de ser ellas algo insípidas. * Cucamis dcliciosus (Roth. cat. 3, p. 327). N. V. melón de olor. Originaria de la América Central. Tiene frutas del tamaño de una naranja, carne blanca, insípida, pero muy fragante. Se cultiva poco en la K. A. * Cncnmis sativas (L. spec. 1437). N. V. pepino; colioaihro (en España). Originaria de Asia; se cultiva en casi todas partes en la R. A., con excepción de las regiones subtropicales. — 318 - El jugo de Ins semillas frescas se ha usado contra en- fermedades del pulmón y tiene virtudes diuréticas y di- luentes; mezclado con leche, se le considera como cos- mético, y se fabrica una pomada con las semillas. Las frutas auu no maduras se comen, como ensalada, crudas con vinagre y aceite; los pepinitos pequeños se cocinan y se ponen en vinagre con sal y especies para intermedio con comidas de carne. Las semillas oleaginosas pueden servir para emulsiones calmantes. * Cucu'inis Mnlo (L. spec. 1436). N. V. melón. Originaria del Asia tórrida; se cultiva mucho en la R. A. Las semillas se han usado para los ¿iiismos objetos que las de Cuc^nnts Sfitivus y también en casos de lombrices. La raíz es emética y contiene una sustancia especial (la enietlna de melón). Las frutas se comen crudas con azúcar ó con pimienta y sal. El jugo de las frutas no maduras se usa igualmente contra lombrices. Con esta plantu puede además fabricarse vinagre y mezclada con mosto de vino, dá aguardiente. Las semillas se usan para emídsiones calmantes. * Citrullus Colocijnthis (Arnott in Wight. Icón. II, 498), syn. Ciicumis Colocijnthis (L. spec. 1435). N. V. zapallo del diahlo\ coloquintida ó tuera en España; hnndal de los árabes. Yerba ti'epadora, originaria de las islas Griegas y de Turquía, á veces espontánea en la R. A., v. gr., C. Las írut-ts contienen una sustancia amarga y drástica, la coloquintina ; son purgantes, drásticas y usadas inte- riormente en casos de lepra, hidropesía, obstrucciones, gota, supresión de la menstruación, parálisis de las ex- tremidades, enfermedades crónicas de los nervios, demen- cia, etc.; exteriormente, se usan las frutas calentadas — 319 - para curar bubones. Las semillas contienen un aceite graso, no son amargas y venenosas y, en algunas re- giones de x\fríca, se usan como alimento. * Citn/lli/s vulgaris (Schrad., in Eckl. et Zeyh. enum. 279) syii. Cu cu mis Citrullus íSéringe, in DC. Prod. 11, p. 801); Cucuriiitd Citrulliís (L. spoc. 14-¡5). N. V. Sííndin. Yerba trepadora originaria del Asia meridional; se cul- tiva en casi toda la R. A., con excepción de las provin- cias, meridionales. La carne interna generalmente rosada de la fruta, ({ue alcanza á veces á un tamaño considerable de casi un metro de largo, es aromática, dulce y se come cruda. La pulpa externa debajo de la corteza de la fruta, de color blanquecino, se corta en pedazos, se cocina en agua sa- lada, y se pone en vinagre con algunas especies sirviendo como intermedio con comidas de carne. Las semillas contienen un aceite graso. * Cucúrbita Pepo (L. spec. 1435). N. V. ¡jerr/ua ; zapallo. Yerba trepadora originaria del Asia meridional; se cul- tivan diversas variedades en todos los puntos de la R. A., y se halla á veces espontánea. Las semillas contienen un aceite ; se han usado como las de la calabaza , y las de algunas variedades (v. gr., var. occidentaíis [L.|) sirven para hacer botar la tenia y otras lombrices. La cnrne de la fruta se come de diver- sos modos, especialmente cocida en la comida argentina llamada «puchero». Los brotes nuevos de los tallos pueden comerse como legumbre. Las cascaras de las frutas son empleadas por los paisanos para trasportar agua de los manantiales, etc. * Cucúrbita máxima (Duch. in Lam. dict. 2, p. 151). N. V. zapaUo ¡■edondo, calabaza totanera ó confitera. — 320 - Yerba trepadora originaria del Asia meridional; se cultiva á veces en la R. A. Las frutas (\i\e alcanzan á un i tamaño considerable y á veces de mucho peso, tienen la carne mas dura que la de C. Pepo, pero es jugosa y se come como la de éstas. Las cascaras se usan en lugar de vasijas para líquidos, etc. * Cucúrbita Melopepo (L. spec. 1435). xN. V. zapallo bonetero, calabaza pastera, cantoria, bonetillo, cabeza de turco. No se conoce la patria de esta yerba trepadora; se cultiva á veces en la R. A. La fruta de forma glo- bosa aplanada se come como la de las especies nnteriores, y sus semillas aceitosas se usan taml)ien para hacer emulsiones dulcificnntos. * Cucúrbita verrucosa (L. spec. 1-435). N. v. zapallo barbaresco. Patria desconocida; se cultiva raras veces en la R. A. Las frutas se comen como las de las especies arriba mencionadas y con sus cascaras se hacen también vasijns. Caija ponía Sandia (Cogn. ap. Grisebach Symb. n. 794). N. V. sandia purr/ante. E. Las semillas se usan como purgante. Begonlaccae. Begonia octopeiala (L'Hér. stirp. p. 101). Ct. T. (sierra), (Perú, Bolivia). Begonia coriácea (A. DC. in. Ann. se. nat. ser. 4, v. 11, p. 122). T. (sierra), (Bolivia). Begonia cucullata (VVilld. sp. 4. p. 414). E. T. (Brasil. Bolivia). Begonia micranthera (Gr. Pl. Lor. n. 315, Symb. n. 805). T. (faldas baias de la sierra). Estas yerbas tienen el n. v. de agrio-agrial. — 331 — Todas ellas contienen oxalato de cal y oxalato de potasio y poseen propiedades vulnerarias, antiflogísticas, béchicas , diuréticas y antiescorbúticas. El jugo de la yerba se emplea en casos de afección cataral del pulmón, de la vejiga, de inflamación é irritación de las vias urinarias, enfermedades de la bilis, etc. Además, se han recomendado las raíces de algunas especies del género Hegonia como purgantes y antisifilíticas, y parece que especialmente los tubérculos relativamente grandes de la B. coiiaccd tienen estas propiedades. Las hojas de B. ouciillata (y quizás también de las otras) pueden ser comidas como legumbre. Cacteae. Cereus qulsco (Gay Hist. C'hil. bot, 3, p. 19) V N. V. cardan de candelabro ; ucle, (en Chile quisco)\ las frutas: tunas peludas ó chulas. G. K. Ct. S. J. etc. (Chile V). Árbol que alcanza á una altura de mas de 6 metros, especialmente en los alrededores de las Salinas grandes. Las frutas son comestibles y con ellas puede fabricarse un jarabe y también aguardiente. La madera del tronco cuyo diámetro tiene á veces '/a metro, se usa en ciertas partes, v. gr., en la quebrada de Humaguaca (J.), á falta de otro, para vigas de techos de paja, tablas de puertas y, en las minas de Catamarca, sirve para trabajos de mamposteria; no expuesta á las influencias de la hume- dad dura siglos; sirve además para combustible. Rhipsalis sannentacca íOtto et Dietr. Allg. Gtnztg. IX, 98). T. S. Am. cal.). Epífita que vive sobre las gruesas ramas de árboles viejos y cuyos tallos cilindricos se hallan colgando de éstas. La fruta blanca es comestible, del tamaño de la grosella {Ribes Grossularia L.). es comestible y tiene el mismo sabor. Ji/ilpsalis pentapk'ra (Pfeiff. et Otto, Abbild. ii. Beschrcib. blühund. Cact. t. 17, fig. 1). N. V. hiKisca-ínuiscd . Ct. T. O. Eí^ también epífita en árboles; no conozco el usu que de ella se hace. * OpuiUia F i cus- Indica (Haw. syn. 191); syn. Coolus Ficns indica (L. spec. 670). N. V. 'penca\ de las frutas tunas. Arbusto ó árbol de 5 á 6 metros de altura mayor, originario de la Am. cal. Se cultiva en la R. A. (con excepción quizás de Patagonia) y su cnltnra es muy esparcida y frecuente. La pulpa de los miembros del tallo, que alcanzan á un largo de hasta '/s metro y son de forma aplanada ó de la de hojas grandes, se usa para cataplasmas en casos de dolores reumáticos y gotosos y para a1)landar los callos. Estos miembros divididos por la mitad, tostados, salados y puestos en vinagre, se usan como cataplasmas contra pasmos del estómago, flatos y dolores del hígado. La pulpa desleída en agua tibia se emplea al principio de la enfemedad para bañar á los enfermos de viruelas (?). Unas pocas gotas del jugo de la pulpa sirven como pur. gante y contra lombrices. Las frutas maduras y crudas son un manjar muy agradable y con ellas se hace aguar- diente, arrope y un dulce rico que aseguran ser muy saludable para los qu(! padecen de enfermedades del hígado ó del pulmón. La planta trasuda una especie de goma-resina semejante á la goma alquitira ó tragacanta (que es producto de algunas especies de Astragalus). En esta especie se cria la cochinilla (Coccus Cactii, llamada con el nombre vulgar de ugranayy, cuyo uso como materia tintórea es muy conocido. En la R. A. existen además un número considerable i — 3-23 — de especies indígenas del mismo género. Algunas pro- ducen ñutas comestibles conocidas bajo los nombres vul- gares de (juaijcnrú, ciscaíudo y paqui ó huecos de indios; otras segregan una especie de goma, se cria en ellas la cocliiiiilLa y tienen el nombre vulgar de nopal, quiclui- Ludoy coscoja, etc.; dos ó tres, que son arbustos de alguna altura y tienen tallos articulados muy espinosos y muy ramificados, son conocidas con el nombre vulgar de ^je/iCíf del campo y se plantan al rededor de los patios, corrales, quintas, potreros, etc., para la formación de cercos vivos. Siento que de muchas de estas especies me faltan aun determinaciones exactas, asi que no pu(ído hacer a(¡ui una mención especial de ellas. Pereskia Sacharosa (Gr. Symb. n. 837). N. V. sacha-rosa. Arbusto de 1 á 2 metros de altura, muy espinoso en S. O. J. (Bolivia). Se le planta con otros arbustos en cercos vivos para hacerlos inpenetrables. Cataplasmas hechos con las hojas machacadas son usados en casos de quemad ui'as. Ficoideae. * Totrarjoma expansa (Ait. hort. Kew. 2, p. 178). N. V. espinaca de Nueva-Zelanda. Yerba originaria do Nueva-Zelanda y del Japón; se cultiva raras veces en la K. A., v. gr. en BA. E. En sus patrias se usa como remedio antiescorbútico, diurético y pectoral. La yerba se come cocinada como la espinaca y es una hortaliza de buena calidad. Umbelliferae. /Jijdr(ic¡)l!jle bonariensis (L;ini. dict. 3, p. 147). N. V. redonditas del a,;/ na. íembladerilla. Yerba común en toda la K. A. El jugo fresco de la yerba aromática, (pie en grandes — 324 — dosis es emético, se usa en enfermedades del hígado, de la me isa, del pulmón y contra retención de orina (iscuria). El agua destilada con la yerba se usa como cosmético para hacer desaparecer las pecas. Las hojas son admi- nistradas en cataplasmas para curar heridas inflamadas é inflamaciones del cutis. Azordla Gilliesii (Clos, in Gay, hist. Ghil. bot. III, p. 84); syn. BuLax Gilliesii (Hook. Bot. Mise. III, t. G3, p. 321). Arbusto en las sierras altas de M. SJ. (Chile). La planta es muy resinosa y se usa esta resina (bolax) como incienso; en medicina es empleada como béchico y expectorante, contra la gonorrea y los dolores de cabeza; exteriormente, se administra en casos de endurecimiento de las glándulas y, disuelta en nlcohol, contra el reuma- tismo. Azorella ¡/lebaria (Clos, in Gay, hist. Chil. bot. III, p. 87); syn. Bolax globaria (Comm. ex Gaudich. ann. se. nat. 5. p. 104, t. 3). P. (Chile). Azorella caespitosa (Cav. icón, et descr. 5, p. 57, t. 484, f. 2). P. (Chile). Azorella madrepórica (Clos, in Gay, hist. Chil. bot. III, p. 79). Ct. (Chile). Azorella diapensioides (As. Gr. Un. St. expl. p. 7Ü2). Ct. (cordilleras de BoUvia y Perú). Estos arbustitus tienen el nombre vulgar común de jareta ó llareta. Producen también la misma resina que la Azorella Gil- liesii y se hace Je ella un uso idéntico. Las especies mencionadas de Azorella y otras más del mismo género, sirven de combustible en ciertos parajes de las Cordilleras altas, por ser á veces la única leña que se encuentra en ellos. — 325 — Asteriscium clülense (Cham. et Schlecht. in Liniiaea 1826, p. 254, t. 5, f. 1). N. V. anisillo (en Chile). P. M. (Chile). En Chile, en donde se halla esta yerba con frecuencia, los indígenos le atribuyen poderosas virtudes carminativas. Asteriscium polycephalum (Gilí, et Hook. Bot. Mise. I, 382); syn. Dypterygia isatidicarpa (Prsl. msc), Mulinum isat.. (DC. Prod, IV. 80). Gijmophytum po¿//c. (Clos, in Gay, hist. Chil. bot. IH, p. 1Ü2, t. 32). N. V. yerba agria. M. SJ. R. (Chile). Tiei:.e también propiedades carminativas. Eryngiuin agavifolium (Gr. Pl. Lor. n. 344). N. V. escorzonera. Sierra Achala de C. (llevada en los bajos por los rios). La infusión teiforme de la raíz aromática y carnosa se usa como pectoral y digestivo. * Conium 'maculatum (L. spec. 349). N. V. conio, cicuta\ cañaheja (en España); barrac3 (en Chile). Yerba originaria de Europa; espontánea en muchas partes de la R. A. Coatiene coniina, alcaloide muy venenoso que se ha usado en dosis pequeñas como calmante en enfermedades del corazón, neuralgias, etc. Las hojas y frutas son también muy narcóticas y se ha hecho uso de ellas en enfermedades del sistema linfático, hinchazón y endure- cimiento de las glándulas, escrófulas y úlceras malas y cancerosas. Las cabras comen la planta sin (pie les pro- duzca esti el menor daño. Apium Amnii (Urban Fl. bras. XI, 1, 341 [fase. 82]); syn. Sisón Ammi (L. spec. 363)?; Helosciadiion íepto- phylLum (DC. mem. soc. genev. vol. 4). — 326 — N. V. eneldo culaiilriUu, apio c'nnaron ó silvestre. Yerba común en casi toda la R. A. (Ain. raer.). Los frutos Sf. lian usado como carminativos para cor- regir y disipar los ñatos. La infusión de la yerba se usa en la K. A. para entonar los desarreglos que sobre- vienen á las mugeres después del parto, como también para lavativas. El decoctado de la planta es empleado para lavar úlceras, heridas y erupciones cutáneas. * Apiuvi 'jraueolens (L. spec. 379). N. V. apio, ccleri. Yerba originaria de Europa ; se cultiva en muchas co- marcas de la R. A. Las raices que en cierta variedad tienen un grueso considerable, se emplean como legumbre, en caldo, etc., y para ensalada; el mismo uso se hace de los pecíolos carnosos de las hojas. Raíz, hojas y frutas (vulgar- mente llamadas semillas) se han empleado en medicina como diurético; sin embargo, no se recetan ya por (pie producen también efectos afrodisiacos. En Grecia, se receta el cocimiento fuerte de la raíz en casos de fiebres intermitentes, contra las que igualmente han sido emplea- das las semillas. * Annni Vlsnaga (Lam. dict. I, p. 133). N. V. viznaija. Yerba originaria del Sud de Euiopa, Norte de África y del Oriente; ahora espontánea en nmchas regiones de laR. A. Los frutos son aperitivos, diuréticos y usados en casos de supresión de la menstruación. La infusión de toda la yerba se toma contra el flato y se usa en lavativas para las almorranas. Los pedúnculos de las umbelas parciales pueden usarse para mondadientes. La raíz es comestible como la de las zanahorias. * A))i)ai inajus (L. spec. 34Ü). N. V. en España ainmi üul(/ar ó jistra. — 327 — Yerba, originaria del Sud de Europa, espontánea en BA. Las semillas (frutos) (soiiina Ammeos vulgaris s. Am- mi Ph. Gall.) tienen propiedades cnnninativaSj estimu- lantes y estomacales; en tiempos antiguos han sido preco- nizados como remedio contra la esterilidad de las mugeres. * Carum Petroselinum (Benth. Hook. gen. I, p. 89); syn. Petroselinum satiiyarií ^^Hofím. urab. I, p, 78, t. 1, f. 7); syn. Apium Petroselinum (L. spec. 379). N. V. perejil. Yerba originaria de Europa y del Asia menor; se cul- tiva á veces en la R. A. Contiene apuna. La raíz, la yerba y los frutos {radix, lierba et semina Petroselini s. Api i liortcnsis) son pode- rosos diuréticos y se usan en la, hidropesía; los frutos sirven contra la fiebre intermitente. También se hace con ellos un polvo (jue sirve para componer un ungüento administrado para hacer desa,parecer los piojos de la ca- beza. Para el mismo fin sirve el aceite volátil extraído de los frutos maduros. La yerl>a puesta sobre el pecho de las mugeres les hace, según dicen, secar la leche y también es administrada en casos de mordeduras y pica- duras de insectos, etc. Muy conocido es el uso que co- mo especie se hace de las hojas nuevitas y de la raíz en el caldo, etc. * PimpineKa Anisuní (L. spec. 399). N. V. anis. Y'^erba originaria de Egipto y de Grecia; se cultiva en algunas comarcas de la R. A. Los frutos maduros (vulgarmente semillas) (semen Anisi vulgaris) contienen un aceite volátil (oleum Anisi aethe- reurn) que se usa para la sarna y mata á los insectos. Además, se recetan estos frutos como carminativos y re- solutivos para la toz, contra catarros crónicos, espasmo de los párvulos y para aumentar en las nodrizas la se- Bol. Acad. IV. 22 ciecion de la leche; se usnn para aromatizar la caña ó el aguardiente de azúcar, destilando con ella dichos frutos en la fabricación del licor, y sirven también como especie para pastas y masas. * Foeniculum vulgare (Gaertn. fruct. I, 105). N. V. hinojo común. Yerba originaria del Sud de Europa; se cultiva á veces y se halla espontáneamente en la R. A. Todas sus partes son aromáticas. Los frutos {semina Foeniculi viilí/aris s. acii) son oficiníiles y se usan como carminativo y estomacal, especialmente en enfermedades de los párvulus. El aceite {oleum Foeniculi afítiiereiim) que se extrae de ellos es empleado para matar sabandijas, en casos de sarna, etc. La raíz y la yerba se usaron también antes en medicina: exteriormente, contra infla- mación del pecho, é interioi-mente , contra ictericia, etc. La raiz y la yerba nuevita se comen como legumbre, en ensalada, etc. * Foeniculum piperitum (DC. Prod. IV, p. 142). N. V. Iiinojo asnal. Yerba originaria del Sud de Europa, espontánea en al- gunos puntos, V. gr., de las provincias de C. Ct. R. El polvu de la raíz es. según dicen, drástico y la in- fusión de sus hojas se usa para calmar la sed de los enfeimos que tienen fiebre. Los frutos son muy aromá- tico.-^, de gusto semejante al de la pimienta, y su aceite puede usarse contra la sania y para matar las sabandijas. En Córdoba, suministran la infusión de los frutos en casos de ahoguído. * PcuccdanuDí Pastinaca (sec. Benth. Hook. gen. I, 920); syn. Pastinaca sativa (L. spec. 376). N. V. cltiriiua, pastinaca. Planta originaria de Europa, espontánea en terrenos cul- tivados de muchas regiones de la R. A. — 329 — La raíz, es dulce, {radix Pastinacae sativae) comesti- ble, y se dá á los enfermos de tisis, de cáculo de la ve- jiga y contra fiebres intermitentes. Los frutos que con- tienen un aceite volátil se usan como diuréticas. Las hojas nuevitas pueden también comerse como legumbre. * Coriandriinn sativum (L. spec. 367). N. V. culantro^ cilantru. Yerba originaria del Sud de Europa, dej Asia menor, etc.; se cultiva poco en la R. A. Los frutos (semina Coriandri) son medicinales y se usan como los del anis y del hinojo comun\ contienen también un aceite volátil. Se ha hecho uso de las hojas en la ictericia y, exteriormente, se han empleado contra inflamación del cutis, úlceras, etc. Se usa además como especie, para confites, etc. La planta fresca tiene un olor desagradable, huele á chinchas y es considerada como vermífuga, carminativa y estomacal. * Daucus Carota (L. spec. 318). N. V. zanahoria. Originaria de Europa y Asia; se cultiva en algunas comar- cas de la R.A. y se halla espontáneamente, pero raras veces. Los frutos (semina Dauci silvestris) han sido medici- nales y empleados como diuréticos y carminativos. La raíz de la variedad que se cultiva se emplea cruda contra los lombrices y del jugo de ella se hace un jarabe que posee la misma virtud. El jugo de la raíz ó su harüía se ha usado en afecciones catarrales del pecho; exterior- mente, el jugo ó la raíz triturada se han empleado contra úlceras malas y cancerosas, mientras que el aceite volátil que la raíz contiene se usa como emenagogo. Es ade- más muy conocido • el empleo que se hace de la raíz como legumbre liviana y alimenticia; con ella puede fa- bricarse aguardiente. Las flores pueden usarse para teñir de color rojo. — 330 — Araliaceae. Pentapanax aníjelicifolíus (Gr. Symb. n. 849). N. V. palo de San Antonio. Árbol de 8 metros de altura mayor, pero generalmente mucho mas bajo en las selvas subtropicales de T. S. J. La madera es floja. No conozco el uso que se hace de la planta. * Hederá Heiix (L. spec. 292). N. V. yedra. Arbusto trepador originario de Europa; se cultiva en muchos puntos de la R. A. Las hojas (herba Hederae) tienen un gusto amargo aro- mático y desagradable, son diuréticas y vermífugas y se recetan interiormente á las personas muy ñacas ó escro- fulosas; exteriormente, se emplean como vulnerario para quemaduras y úlceras podridas, como cauterios y para teñir el pelo de color negro. Las bayas y la madera (baccae et lígnurit IJederae) se han usado como diaforé- tico y contra la fiebre intermitente. Con la madera se fabrican glóbulos de fontanelas y cubiletes en los que se hacia beber los enfermos atacados de inflamaciones. La raíz se ha usado como incienso para los dolores del co- lodrillo. La goma resina que sale espontáneamente de los tallos gruesos y que puede ser extraída artificial- mente por medio de incisiones, es agradablemente aro- mática y se dice que es afrodisiaca. C'aprifoliaceae. Sainbncus peruviana (Kth. in Humb. Bonpl. nov. gen. am. 3, p. 429). N. V. sanco. Gt. T. (sierras bajas), (Perú, Bolivia). Árbol ó arbusto que se cria hasta una altura de 8 metros y cuyo tronco tiene hasta 7^ metro de diámetro. — 331 — Las flores, las bayas y la corteza verde (de los gajos nue vitos) tienen propiedades purgantes. La infusión caliente de las flores puede emplearse como la de las de su nliado europeo, del S. nii/ra (L.), p;ira diaforé- tico y atemperante suave. De las frutas maduras, que tienen un gusto mas agradable que las de S. ui.ijra (L.), puede hacerse dulce; y, si son comido crudas, pro- mueven algo el sudor y purgan suavemente. La made- ra se usa para varas de techos de ranchos, catres (en los que se pretende que no se crian chinchas) y para combustible. Sanihucus australis (Cham. Schlecht. in Linnaea 1828, p. 140). N. V. saúco. E. Corr., cultivado y espontáneo en C, etc. (Bras. mer.). Arbusto de 3 á 4 metros de altura que se cultiva mucho en cercos vivos. La infusión teiforme de la flor se usa en casos de indigestiones, es diurética y sudorífica y em- pleada exteríormente es vulneraria. La entrecáscara (liber) y las flores se emplean mezcladas con leche (se- gún A. Murillo, Botan, y Mater. med. chil. in An. Un. Chil. V. 28, p. 607) p;ira hacer gárgaras, en los casos de angina tonsilar y esquinencia. El zumo de la entrecás- cara (liber), tomado con agua, es purgante y se usa en Chile en casos de ascitis é hidropesía. Con las bayas pueden hacerse dulces. Las hojas ma- chacadas y aplicadas en cataplasmas sobre la garganta, hacen desaparecer la inflamación de las glándulas y se les emplea también para curar heridas recientes hechas con instrumentos cortantes. La corteza y los tallos tiernos sirven para teñir de color verde manzana la lana prepa- rada con alumbre ; el aserrín de la madera, con alumbre, tiñe de un color amarillo pardusco. — 332 — Rubiaceae. Cephalanlhus Sarandi (Cham. et Schlecht. Linnaea 1827, p. 610 et 1829, y. 147). N. V. sarandi negro ó colorado. B\. E. (Bras. mer., BoHvia, Perú). Arbusto que tiene apenas una altura de 2 metros. No conozco el uso que de» él se hace. Quizás tiene su cor- teza propiedades antifebriles y béchicas como las de C. occidentaUs (L.). Hcleroplnjllaea lanceolata (Gr. Symb. n. 919). N. V. cieg adera. Arbusto de 1 á 2 metros de altura, indígeno en la sierra entie Guachipas y el Rio del Tala, frontera de T. y S. Según los campesinos, es planta venenosa para, los ani- males que comen las hojas y produce ceguera. ManetMa cordifoíia (Mart. spec. mat. med. bras. I, p. 19, t. 7); y su variedad glabra (Cham. Schlecht. Linnaea II, 169). E. (Brasil. Paraguay). Yerba, trepadora. En el Brasil se usa la raíz emética como remedio eficaz en In hidropesía y la disenteria. Manottia leianthifolia (Gr. Pl. Lor. n. 365; Symb. n. 922). T. S. Yerba trepadora muy aliada á la anterior. La raíz tiene quizás la misma propiedad que la de la anterior. Calyco/tliyllum multi/lorinn (Gr. Symb. n. 920). N. V. palo i)lanc(). Árbol alto que llega hasta 16 metros de altara y tiene su tronco V* metros de diámetro en las selvas subtro- picales. O. Ch. Corr. (Paraguay). La madera del tronco recto de este árbol es dura, finn. sólida y tiene un color pajizo. El nombre vulgar pro- - 333 — viene del color de la corteza que por lo general es blan- quecina. Cqu tarea alba (Gr. Symb. n. 918). N. V. cascarilla. Arbusto ó árbol de 3 á 4 metros de altura en J. O. (Bolivia). Es muy aliada á la C. speciosa (Aubl.) y se usa la corteza (cascarilla), como la de esta contra fiebres, inter- mitentes é indigestiones; es emética y laxante. Pogonopus fcbrífugus (sec. Benth. Hook. gen. I, p. 48); syn. Howardia febrífuga (Wedd. in Ann. se. nat. IV 1, t. 10, fig. 1 3). N. V. cascarilla, vireina del monte, quina. Árbol de mediana altura en J. O. (Bolivia). La corteza se usa como remedio eficaz para fiebres intermitentes. Hamelia patcns (Jacq. amer. p. 7'2, t. 50). Arbusto alto y leñoso en las selvas subtropicales de O. (Am. cal.). Randia aculeata (L. spec. 214); syn. R. latifoUa (Lam. dict. 3, p. 24, ill. t. 156, f. 1). N. V. palo de Santo Domingo. Arbusto alto en O. (Am. cal.). La madera es de buena calidad. Las frutas negro- violadas se usan para teñir. Randia pubescen s (Ruiz et Pav. fl. per. 2, t. 120, f. b.). N. v. palo de Santo Dondmgo (S. O.), tista-tista (T). Arbusto ó árbol bajo en T. S. O. J. (Perú, Bolivia). La madera es de buena calidad. * Gardenia florida (L. spec. 305). N. V. jaziiiin del cabo. Arbusto originario de la Cbina y délas Indias Orientales; se cultiva en la Pv. A. por sus lindas flores blancas, y fragantes, — 334 — En China se usan las bayas, que son de color naran- jado, como refrigerante y emoliente, en fiebres, tisis é iscuria, para las inñamaciones de los ojos, sarpullido» lepra, etc. Con el zumo, los Chinos tiñen tejidos de seda de color azafrán. * Coffea arábica (L. spec. 245). N. V. arbusto del café, cafó común. Arbusto originario de Arabia y Etiopia. Se cultiva con buen éxito desde un decenio en J. y O,, y desde algunos años en Corr. El uso económico del decoctado de las semillas tostadas y molidas es muy conocido en todo el mundo. Contienen ellas un principio amargo, la cafeína, que se usa en me- dicina para dolores de cabeza (jaqueca). Las" semillas {sonina Coffeae arabicae) se usan crudas y tostadas contra fiebres intermitentes, diarreas, tos convulsiva, y como antídoto en casos de envenenamientos con opio y alcohol; exteriormente, sirve para polvo de limpiar dientes. Las hojas contienen mayor cantidad de cafeína que las semillas pero no poseen el aroma de estas; se toman en infusión como té y se encuentran en el comercio como succedáneas del té. S/)i'niiacoce riparia (Cham. Schlecht. in Linnaea 1828, p. 355). E. (Brasil). Yerba muy aliada á la Sp. Inniji folia (Aubl.) que, en Venezuela, y las Guayanas, usan los negros paia curar la gonorrea. Borreria verticillata (Meyer esseq. p. 83); syn. Spcniíacoce verticillaki var. Americana (L. spec. 148 exl. syn.). E. C. (Am. cal.). La raíz {ípecaoian.ha de Jamaica) es acerba y amarga, de color violado en el interior, y se ha usado en medi- cina como flemagogo. — 335 — Galianthe clideinoides (Gr. Symb. n. 936). N. V. (juaycurú. E. La raíz voluminosa de esta yerba, una vez hervida., se usa como remedio en las enfermedades de las vias uri- narias, y también para remover todas las impurezas del cuerpo. Mitmcarpuiii Peladilla (Gr. Symb. n. 941). N. V. peladilla (E.). E. C. (en la sierra baja). Se usa esta yerba como remedio contra la fiebre inter- mitente (chucho). Richardsonia scabra (St. Hil. pl. us. n. 8, t. 8). N. V. yerba de pollo (seg. Lorentz). E. C. T. etc. (Am. cal.). La raíz {ipecacuaniía alba .y. ainylacea s. faiinosa s. undulata)áe esta yerba es menos emética que la verda- dera ipecacuana {Cephaelis I pecacuanka Rich.), sin em bargo se ha hecho uso de ella en lugar de esta. Ricltardsonia pilosa (Kth. in Hunib. Bonpl. nov. gen. am. 3, p. 350, t. 279). E. S. (Bras., Nueva Granada, Perú, etc.). Se usa la raíz como la de la anterior. Galium pusiliioii (Endl. in Walp. Kep. II, p. 459) syn. Rubia pusilla (Gilí, in Bot. Mise. III, p. 363). N. V. raices; raíz para flujo. P. SL. Galium /lirsutuiii (Ruiz et Pav. fl- per. I, p. 59). N. V. raíces, soconder, socando. Ct. T. (Perú). Galiimi Ricliardianuin (Endl. in Walp. Rep. 11. p. 459) syn. Rubia Richardiana (Gilí. ap. Hook. Arn. in Bot. Mise. III, p. 363). — 336 - N. V. raices, soconder, socondo. M. R. Ct. T. S. (sierras). Galiuin bif/eiiiinurn (Gr. Pl. Lor. n. 376). N. V. falces charrúas ó barí anqueras. BA. E. CoiT. C. Las raices de las especies citadas de G a Ivon se usan para teñir la lana color rosa ó punzó. Contienen proba- blemente (según M. Siewert; en Napp : la Rep. Argen- tina p. 27S) alizarina. La lana se tiñe sin mordiente alguno; las tintas son firmes y resisten á la nccion de los rayos solares y del jabón. * (laliuní Aparine (L. spec. 157). Yerba origin-u'ia de Europa; ahora espontánea en E. El jugo fresco de la yerba ha sido medicinal en enfer- medades del hígado, escrófulas, papera, hidropesía, cáncer, etc. ; se emplea interiormente como diurético y abluente y exteriormente en ungüento. Las semillas tostadas se sustituyen al café en algunos países. Valerianea Pliyllaciis ferax (Gr. Symh. n. 955). , Yerba bienal cuyo tallo florido alcanza á veces á una altura de 2 metros; es indígena en la Sierra Achala de (J. La raíz tiene el mismo olor aunque no tan fuerte que la de Valeriana officinalis (L.), contiene quizás el mismo aceite y puede usarse como tónico excitante en enferme- dades nervinas, pasmo, histeria, etc. Dipsácea. * Di'psacus FuUonwm (Mili. dict. n. 1). N. V. carda, cardencha. Yerba originaria del Sud de Europa donde también se cultiva; espontánea en las orillas de arroyos, vegas, etc. de las cordilleras y sierras de la R, SJ. P., etc. La raíz diurética y sudorífica se ha usado antes en medi- — 337 — ciña para excoriaciones; interiormente, contra la tisis, sí- filis, hidropesías, etc. Las flores y semillas han sido consideradas como remedio conira las mordeduras de perros rabiosos. Las cabezuelas sirven en la fabricación de los paños y tejidos de lana, para cardar ó afelpar dichos artefactos. Calycerea. CaUjcera sinuata (Miers, Contr. II, p. 35, tab. 50 B.). N. V. bailabien. Yerba en las cordilleras de SJ. (Cbile), cuyo uso ignoro. Compositae. Veril onia mollisshna (D. Don in Herb. Lambert; Hook. et Arn. Comp. Bot. Mag. I. p. 237). N. V. sudorífico. BA. SF. C. SL, Los campesinos atril)uyen á esta planta virtudes diafo- réticns excelentes. Elephantopus scaber (L. spec. 1313, excl. syn. Gron. et Brown) . T. S. etc. (zona cal.). La yerba es ligeramente astringente. El decoctado de la yerba y ele la raíz amarga se usa en la Costa de Malabar contra la disuria; frescas, son empleadas para cubrir excoriaciones y úlceras. Enpatoriuin cunyzoides (Vahl, symb. 3. p. 96). T. S. J. (Am. mer.). Se usa en algunas partes de Sud-América, como tónico- excitante, en la diarrea, cólica ventosa y fiebres. Eupatorium íaevigatum (Lam. sec. det. Gr. Symb. n. 1003). E. T. J. Arbusto de 4 á 6 metros de altura. Las hojas con- tienen un color azulado semejante al Índigo ó añil, y es por (ísta razón que se le cultiva en Algeria. - 338 - Eupatorium. virgatuin (Don ex Arn. ap. DC. Prod. VII, p. 269; Gr. Pl. Lor. n. 402, SymV). n. 1015). N. V. romero; romerilo. E. M. C. R. Ct. T. S. (Urug. Bnis. mer.). Usan este aibusto bajo en la tintorería de lana. Eupatoriu)!! artemisiifolhDii (Gr., Symb. n. 1019). C. (sierra chica). La yerba es amarga y contiene probablemente eupa. t orina. Eupatorium ceratopkijllum (Hook. Arn. ex det. Gr. Pl. Lor. n. 412 et Symb. n. 1031). E. C. (Bras. mer. Urug.). La yerba es muy amai'ga y probablemente contiene también eupatorina. Recomiendo á los médicos de hacer con esta yerba ensayos en casos de fiebres intermitentes, ictericia, etc. Eupatorium. prasiifolium (Gr. Pl. Lor. n. 403.; Symb. n. 1020). E. C. T. S. Eu/patorium betonicifonne (Bak., ñ. bras VI, t. 96). E. T. S. O. (Urug. Parag. Brasil). Eupatorium Candolleanum (Hook. x^rn. ap. DC. Prod. VII. p. 270).' BA. E. (Bras. mer. Urug.) Las últimas tres yerbas tienen el nombre vulgar de tabaco del monte, pero no conozco el uso que se hace de ellas. Mikania scandens (Willd. spec. 3, p. 1743 excl. syn. Plum.); syn. M. orinocensis (Kth. in Humb. Bonpl. nov. gen. am. 4, p. 134) y su variedad perijilncifoUa (Hook. Arn. sec. Gr. Symb. n. 1037) syn. M. ajiricularis (Gr. Pl. Lor. n. 415) et M. mendocina (Phil. Sert. mend. alt. in An. Univ. Chile Setiemb. 1870, p. 159 ex spec. auth.). — 339 — Yerba trepadora en M. E. C. Ct. O. (Parag. Bras. Venezuela). Los tallos con sus hojas se usan como los de la M. Guaco (H. B. K.) (Vejuco de Guaco), que los negros de Colombia dicen ser un remedio eficaz contra las ponzoñas de animales (víboras, escorpiones, etc.) y contra la hidro- fobia. En Europa se ha hecho uso de ambas especies contra fiebres intermitentes, reumatismos, gota, pasmos? gálico y contra el cólera. Mikania Charua (Gr. Symb. n. 1Ü38). N. V. charrúa ó charru¡/a. Yerba trepadora en las sierras de C. I i. Ct. El decoctado se emplea para baños que, según dicen' son eficaces en enfermedades cutáneas de carácter sifilítico" Gutierezia ledifulia (Gr. Pl. Lor. n. 428). N. V. alcaparrosa (R.). Arbusto pequeño en las sierras de R. Ct., cuyo uso ignoro Grindelia globu la r¿ folia (Gr. Symb. n. 1067). N. V. quilcha amarilla. C. (sierra Achala). Grindelia pulchclla (Dan. mem. mus. h. n. París 5, p. 51, t. 2). N. V. pichanilla amarilla; quilcha amarilla (C). botoncito. (Ct.). M. SL. C. SJ. R. Ct. T. S. ICsta planta contiene un principio colorante; cocinándola y echándole alumbre se produce un color caña. Lepidophyllum cu pressiforme (Cass. dict. 26, p. 37). Arbusto leñoso y bnjo que alcanza apenas á un metro de altura en P. Lepidophyllum quadrangulare (As. Gray, Proc. Amer. Acad. V, p. 122); syn. Üolichogyne lepidophylla (Wedd. Chlor. and. I, p. 182, t. 30 A). N. V. tola, tola sebosa. — 340 ~ Arbusto bajo. En las cordilleras de la R. Ct. J. (Bo- livia, Perú). Los troncos resinosos de las dos especies se usan para combustible. Erigeron canadensis (L. spec. 1211). Yerba en P. E. BA. C. Ct. (Am. tórr. y templada). Tiene propiedades diuréticas y astringentes. En Norte- América se hace uso de una tintura de toda la planta contra la diarrea y disenteria, y las semillas se esti- man como especialmente activas. La infusión y el decoc- tado se emplean en la hidropesía y en enfermedades de la vejiga. El aceite que se extrae de la yerba es estíptico y se ha recomendado en casos de metrorragia y me- noragia. Erigeron sordídus (Gilí. ap. Hook., Arn. Comp. Bot. mag. 2, p. 254). BA. E. C. (Urug.). Yerba muy aliada á la anterior, posee quizás las mis- mas propiedades. Congza serpenta>'ia (Gr. Symb. n. 1052). N. V. yerba de la víbora, del zorro, de la araña. C. (sierra baja). La planta tiene propiedades diuréticas y se usa contra las mordeduras de animales venenosos (víboras, escorpio- nes, arañas, etc.). Se suministra interiormente la infusión teiforme y exteriormente se ponen cataplasmas hechas con la yerba triturada ó mascada. Dicen que la infusión cura también la hidrofobia y que los baños preparados con ella sanan los reumatismos crónicos. Ikico/iaris saíici fulla (Pers. ench. 2, p. 425, n. 35); syn. B. lanceolata (Gr. Pl. Lor. n. 432, jiion Wedd.). N. V. junco (C. Ct.), chllca (J.), suncho (R. Ct.). Arbusto de 2-3 metros de altura en las playas de los rios, etc., en P. E. C. Ct. R, S. J. etc., (BoUvia, Perú). - 341 — La ceniza de este arbusto contiene mucha potasa y se emplea para baños contra el reumatismo. Para el mismo fin, se usa el cocimiento tle los gajos contra dolores reumáticos y sifilíticos de los pies. Bacc/iaris caUiprinos (Gr. Pl. Lor. n. 444, Symb. n. 1084). N. V. cliilca dulce. Arbusto bajo de apenas 1 metro de altura en las sierras de R. Gt. La infusión teiforme se usa en casos de cólicos; sirve además esta planta para teñir la lana de color amarillo. Baccíiaris Grisebachii (Hieren. Sert. Sanj. in Bol. Ac. Nac. de cieñe, vol. IV, p. 36, n. 88). N. V. quincliaíiial (J.), íancliu (SJ.). SJ. R. J. (Bolivia). Usan el decoctado de los gajos para lavar heridas y sobre estas ponen cataplasmas hechas con las hojas. Bacclmris coridifolia (DC. Prod. V, p. 422). N. V. inio-mio, niu-nio, neoiiiu, nía. BA. E. SF. C. Ct. R. T. (Bras. mer., Urug.). Subarbusto muy venenoso que ocasiona la muerte de los animales vacunos y caballares como también de las cabras y ovejas que lo comen. El envenenamiento se conoce á las siguientes señales: los animales se revuel- can, se echan de lomo, como aquejados de fuertes dolores de barriga, y les sale por la boca una espuma verdosa. Se usan en emplastos los gajos triturados y mezclados con grasa para golpes y manqueras de los animales caballares. Según Carlos Murray (Revista Farmacéutica 1 de Octubre 1862) puede la planta aplicarse como caustico para los caballos; cuando es ingerida, produce sobre el tubo gastro- entérico el efecto de un veneno irritante (Parodi 1. c. p. S8). Baccíiaris cffusa (Gr. Pl. Lor. n. 443). N. V. nno-mio, etc. Ct. T. (E?). - 342 — Esta especie muy aliada ¿i la anterior no parece tener las propiedades venenosos de ella. Creo que deben re- ferirse á esta especie los cuentos de Jos paisanos que di- cen que en ciertas regiones el ihíd-jiiíh no hace daño á los animales. Bacc/iaris artcnüsioides (Hook. Arn. in Hook. Journ. of Bot. III, p. 41). N. V. pícliana blanca. P. BA. E. C. SL., etc. Subarbusto aliado á los dos anteriores. Ignoro su uso. Baccharis notvsergila (Gr. Symb. n. 1108). N. V. carqueija ó carqueja. Subarbusto en BA. E. (Urug.). Con el se hacen escobas. En la medicina popular se emplea contra el reumatismo muscular por medio de baños preparados con la infusión. Bacc/iaris artícuLakt (Pers. ench. 2, p. 425). N. V. carqueja^ carqueija. C. (Bras. mer. Urug.), En el Brasil, se atribu.ye á este arbusto propiedades estomacales y se toma la infusión teiforme contra indi- gestiones, etc. Los campesinos de la R. A. pretenden que la infusión teiforme corrige la impotencia del varón y la esterilidad de la muger, y para hacer concebir las cabras, las obligan á tragar el agua de la phinta hervida; además, con esta agua curan las enfermedades de la piel y, con baños de ngua hervida con esta planta, la lepra y los reumatismos; lavan heridas y úlceras con la misma agua. Se sirven también del polvo de la planta seca como secante para llagas sifilíticas. baccharis cijlindrica (DC. Prod. V, p. 426, n. 200 sec. det. Gr. Symb. n. 1110). N. V. carqueja, carqueija. P. M. BA. C. T. (Brasil). — 343 — Usan este arbustito del mismo modo y para los mismos fines que el anterior. Bacckaris microcephala (DC. Prod. V, 425) syn. B. ar- ticulata (Gr. Symb. n. 1109 spec. entrenan., non Pers.), nec B. microc. (Gr. Symb. n. 1111, spec. cordob.!). N. V. carqueija. E. (ürug. Bras. mer.). Se le dá tamoien los mismos usos. Heterotlialamus spartioides (Hook et. Arn. Journ. of Bot. III, p. 42, n, 1105); syn. Baccharis sarophora (Phil. in An. Chil. Univ. 1870, tom. 35, p. 180, n. 119 ex spec. authent.!). N. V. pichana, escoba. P. BA. SJ. R. Ct. Se emplea este subarbusto para la fabricación de escobas. Heterotlialamus brunioides (Less. in Linnaea 1831, p. 504). N. V. romerillo. C. (Bras. Urug.). Arbusto pequeño que contiene un principio colorante; solo, tiñe amarillo y con alumbre verde. Los gajos se usan para hacer escobas y el tronco resinoso es muy buen combustible. Pluchea Quitoc (DC. Prod. V, p. 450). N. V. en el Brasil quitoc, quitoque ó quituco. P. BA. E. C. Ct. etc. (Bras.). La yerba tónico-amarga se usa como carminativo con- tra la histeria y para baños excitativos. Tessaria absinthioides (DC. Prod. V, p. 457). N. V. pájaro bobo (SJ.); brea (M.). P. M. SJ. C. R. Ct. T. etc. (Chile). El sub-arbusto segrega una especie de cera resinosa que se ha usado para hacer una especie de brea. Bol. Acad. IV. 23 — 344 — Achyrocline flaccida (DC. Prod. VI, p, 220). N. V. márcela ¡lenibra. BA. (Urug. Bras.). Esta yerba posee propiedades tónico-excitantes, y puede emplearse como febrífugo, antihelmíntico y antiespas- módico. Gnaplialium cheiranthifolium (Lam. dict. 2, p. 752). N. V. vira-vira, (vida-vida i) (C), márcela macho (BA). P. BA. C. Ct. R. T. (Bras., Urug.). Gnaphalium cürinuní (Hook. et Arn. bot. Beech. I, p. 31). N. V. vira-vira, (vida-vida ?) ; yerba de La vida. P. G. R. (Chile). GnapiiaHuiii luteo-albu)n (L. spec. 1196). N. V. vira-vira. SJ. (casi cosmopolita). Se usa la infusión teiforme de las ñorcis de estas tres yerbas como depurativo de la sangre, diaforético, febrí- fugo, pectoral y béchico (especialmente contra la tos de los párvulos), pero tiene también propiedades emenagogas. La gente del campo está en la creencia de que tiene una virtud eficaz para conservar la castidad y que es pode- roso antidoto contra las pasiones; por lo tanto, recomen- damos su uso á los señores clérigos ! En algunos parages se sirven de cataplasmas de la yerba contra mordeduras venenosas de víboras, arañas, escorpiones, etc. También se hace uso de la infusión, como vulneraria, para lavar heridas. Se emplea el cocimiento de las hojas contra los ahogos. Acanthospermum hispiduin (DC. Prod. V, p. 522). N. v. guajerilla fO.), rodajillo (T.). C. Ct. R. T. S. J. O. (Brasil). Acanthospermum xanthioides (DC. Prod. Y, p. 521); — 345 — syn. Centhrospermum xanlhmdcs (Kth. in Humb. Bonpl. nov. gen. am. 4, p. 271, t, 397) et Melam'podium aiLstrale (L. spec. 1303). E. (Am. mer.). Las dos yerbas citadas son amargo-aromáticas, tienen virtudes diuréticas y sudoríficas y su infusión se toma contra la diarrea. Las semillas espinosas hacen daño á las gallinas que las comen. Parthcnmm Hysterophorus (L. spec. 1402); syn. Argyro- chaeta hípinnatifida (Cav. icón et descr. IV, p. 54, t. 378). N. V. altamisa del campo (C. Ct.), yerba de la obeja (Sgo.). P. M. C. SJ. SL. K. Ct, Sgo. T., etc. (Am. cal. y tem- plada). Esta yerba tiene propiedadas tónico-amargas. Con la infusión de la yerba se lavan las mordeduras de las ví- boras, dcándola también á beber al paciente. En Jamaica la usan como emoliente y vulnerario y para baños aro- máticos. Ambrosia artemisiaefolia (L, spec. 1401 sec. det. Gr. Symb. n. 1152). N. V. ajenjo del campo, artemisa, altamisa. SJ. C. R. Ct. T. Sgo. S., etc. (Am. setentrional y mer.). La yerba puesta en grasa con la de la ruda (Ruta chalepensis) se usa para untarse los pies cuando están frios y para reumatismos. En Norte-América se emplea interiormente la infusión teiforme de la yerba contra fie- bres intermitentes y lombrices. Ambrosia temii folia (Spr. syst. 3, p. 851), y la variedad scabra\ syn. A. scabra (Hook. et Arn. in Hook. Journ. of Bot. III, p. 311). N. V. ajenjo del campo, artemisa, altamisa. P. BA. E. C. SL. T., etc. (Am. mer.). — 346 — Como la anterior, tiene esta yerba virtudes estimulantes y aromáticas y se hace de ella el mismo uso que de la anterior. Xantlnum spinosum (L. spec. 1400). N. a. cepa de caballo, cepa-caballo -^ en CMe. clonqiU, Yerba muy común en toda la R. A., que es según los unos originaria de América y de la Europa oriental se- gún otros. Se asegura que, lavándola con el agua de la raíz, no se corrompe la carne; de aqui proviene que se usa el decoctado como antipútrido para lavar heridas y humores venéreos y que la suministran en la gonorrea. Se toma tam- bién la infusión teiforme como emoliente, diurético y re- frigerante poderoso en casos de enfermedades del hígado y del pulmón, fiebres intermitentes, indigestiones y para purificar la sangre. También es usada la planta al ex- terior en forma de cataplasmas hechas con las hojas tri- turadas y en baños calientes contra tumores procedentes de frío. Los curanderos de Córdoba curan con esta yerba las inñamaciones y nubes de los ojos : después de mascar tres hojas, estando en ayunas, se ponen en un trapo fino y se hacen caer diariamente tres gotas en el ojo enfermo, operación que debe hacerse por la mañana tapando en seguida el ojo. En Europa se ha recomendado (sin ra- zón!) esta planta como específico contra la rabia, admi- nistrando el polvo seco de las hojas antes que se hayan declarado los accesos de esta terrible enfermedad. Xantldum macrocarpwm (DC. ñ. íV. suppl. p. 35(3); syn. X. üalicum (Moretti, dec. 5, p. 8, n. 50). N. V. abrojo. En toda la R. A. (Am. cal. y templada). El jugo fresco de toda la planta se ha usado en medi- cina contra escrófulas, lanipnrones, enipniue, ú:C(^ras y cáncer; las semillas y raices se nan emplead j on jaioi- — 347 — medades de la vejiga y disenteria. La yerba puede em- plearse para teñir de color amarillo. Zinnia pauciflora (L. spec. 1269). N. V. clavelillo, clavelino. M. C. Ct. R. T., etc. (Am. mei.). Se usa la infusión teiforme como remedio para el chu- cho ó fiebre intermitente. Es yerba tintórea. Eclipta alba (Hassk. sec. Gr. Symb. n. 1160). BA. C. T. J. O., etc. (zona cal. y templada). En las islas Molucas, esta yerba se come como horta- liza. Se hace también de ella un uso medicinal como vulnerario, aplicándola sobre las cortaduras á guisa de los bálsamos resinoso-aromáticos. Pasca lia glauca (Ortega Dec. i, p. 39)? syn. Lorentzia pascalioides (Gr. Pl. Lor. n. 472, Symb. n. 1161 e. p. conf. Bol. Acad. cieñe. IV, p. 81). N. V. sunchillo. BA. E. M. SL. C. Ct. R. Sgo. Es yerba venenosa para los animales, especialmente para el ganado vacuno que no acostumbra comerla en verano; en esta época se señala por su olor aromático semejante al de las especies de pino y de otras Coniferas, como también por su gusto un poco nmargo que, sin em- bargo, no la hace desairar en tiempo de invierno cuando está media seca. Viguieía Gilliesii (Hieron. Sert. Sanj. Bol. Acad. Nac. de cieñe, IV, p, 39); syn. Levjhia Gilliesii (Hook. et Arn. in Journ of Bot. III, p. 313), Heliantlms hetero- pappus (Gilí. ap. Hook. et Arn. 1. c), Cephalophora racliata (Phil. in Pl. Mend. e. p. ! non Less.). N. V. maravilla. M. SJ. (sierras). No conosco el uso que se hace de esta yerba. — 348 - * Helianthus annuus (L. spec. 1276). N. V. girasol. Yerba anual, originaria de Méjico y del Perú (?). Con las semillas (aquenios) puede fabricarse un aceite (oleum seminis Helianthi) que es comestible y sirve para el alumbrado. Se comen las semillas machacadas, ama- sándolas como el pan ó simplemente en forma de papilla. Los tallos nuevitos pelados y los botones de las cabezue- las floríferas se comen como alcachofas. * Helianthus tuberosus (h. spec. 1277). N. V. topinambur, ijaconc (J.)-, patatas de caña en Chile. Originario del Brasil, se cultiva en algunos puntos del Norte de la R. A. Las raíces tuberosas constituyen un buen manjar y se comen como las papas ó patatas de Solanum tubtrosum. También pueden servir para alimento del ganado. Flourensia riparia (Gr. Symb. n. 1182). N. V. chilca. S. Flourensia campestris (Gr. Pl. Lor. n. 478). N. V. chilca. C. R. Flourensia tortuosa (Gr. Pl. Lor. n. 479). N. V. chilca, maravilla (Ct.). Ct. T. Los gajos de estos arbustos sirven para teñir la lana de color aplomado y amarillo, siendo su mordiente el alumbre. El tronco y las ramas segregan una especie de resina aromática que se usa como incienso. Verbesina encelioides (sec. Benth. et Hook. gen. 11, p. 380); syn. Ximenesia encelioides (Cav. icón, et descr. 2, p. 60, t. 178) et X. microptera (DC. Prod. V, 627) conf. Bol. Acad. Nac. Cieñe, t. IV, p. 39.. — 349 — N. V. flor de Santa Maña, mirasol. Yerba en E. C. Ct. R. T. (Méjico, Am. mer.). La raíz cocida con sal y almidón se toma en casos de caldas y contusiones y se pretende que la ceguera se cura con el jugo de la hoja. Las enfermas de parto toman la infusión teiforme para hacer desaparecer ciertos dolores y durezas del vientre. La hoja, con grasa ó cera de abejas caliente, se pone en las verrugas, úlceras, etc. para traerlas á supuración. El cocimiento de la planta se usa para lavar y bañar malos humores, úlceras, etc. Chaenocephalus Suncho (Gr. Symb. n. 1179). N. V. suncho. T. S. O. Arbusto ó árbolito de 3 á 4 metros. La madera sin valor. Heterospermum (livcrsifolium (Gr. Pl. Lor. n. 489). N. V. amor seco, de los frutos saetilla (Ct.). G. Ct. T. S. La yerba sirve para teñir de color amarillo. Se usa la infusión para lavar úlceras, heridas, etc., y se emplea la yerba triturada en forma de cataplasmas para traerlas á supuración. * Dalia variabilis (Desf. cat. h. par. ed. 3, p. 182). N. V. dalia. Yerba originaria de Méjico; algunas variedades se cid- tivan en los jardines como plantas de adorno. Las raices tuberosas y los tallos contienen inulimí y han sido recomendados contra la tisis. En Méjico son usados como remedio diurético y diaforético contra los dolores procedentes de la cólica, los flatos, etc. También son comestibles las raices tuberosas y aun se han dado como alimento al ganado vacuno. Las flores de las plan- tas cultivadas tienen, como es sabido, colores muy diver- sas ; el de las flores purpúreo-violadas se ha recomendado como reactivo muy sensible á los ácidos y álcalis. — 350 — Bidens humilis (Kth. in Humb. Bonpl. nov. gen. am. 4, p. 234) var. tenuifolius (Sch. sec. Gr. Symb. n. 1197); syn. Bidens chilensis var. grandiflora (Phil. plant mend. ex spec. authent. !). N. V. quilcha-mali, las'mna. M. SJ. C. R. S. (sierras); (Bolivia, Perú, Chi]e). La infusión teiforme de la yerba y de la raíz se usa contra In, diarrea y la disenteria y se chupa la raíz para curar el dolor de estómngo, Bidens leucanthus (Willd. spec. 3, p. 1282). C. Ct. T. S. J. O. (Am. mer. y central). Esta yerba tiene virtudes tónico-excitantes. Chnisanthellum procumbens (Rich. in Pers. ench. 2, p. 471). N. V. yerba de San Roque, yerba Roque. C. Ct. Sgo. T. (Caraibas, Antillas, Am. mer.). La infusión teiforme se toma contra las descomposicio- nes del estómago, indigestiones, etc. Ga.linsoga parviflora (Cav. icón, et descr. 3, p. 41, t. 281). E. C. Ct. T. S. J. (Am. cal., Chile). Los indios del Perú y de Chile consideran esta yerba como un remedio antiescorbútico y vulnerario. Schkuhria hmiariensis (Hook. Arn. Journ. of Bot. III, p. 321) syn. Schkuhria abrotanoides (Gr. Pl. Lor. n. 493 et Symb. n. 1209! an Rth. cat. I, p. 116?). N. v. matapulga. BA. E. C. T. (Bolivia, Perú, Méjico?). La infusión teiforme de la yerba amarga se toma para adelgazar y corregir la sangre. La planta se usa tam- bién para matar las pulgas y se la pone con este fin en las camas, etc. Flaveria Contrayerva (Pers. ench. 2, p. 489); syn. Mille- ria Contrayerva (Cav. icón, et descr. I, p. 2, t. 4) ct Vermifuga corymbosa (Ruiz et Pav. syst. 210)„ — 351 — N. V. fique (Ct.), halda (T.), solo (C), chasca; en Chile daudá, matagusanos y contrayerba. Común en toda la R. A.. (Am. mer.). En el Perú, etc., esta yerba es muy estimada como medicamento capaz de precaver de la acción de los ve- nenos y curar sus efectos. En Chile, se la usa como un lijero estimulante para las digestiones perezosas y y como emenagoga en casos de menstruaciones difíciles y suspensiones. Además, es una planta de principio co- lorante que sirve para teñir la lana de color amarillo (Vázquez, Ann. Soc. Farm, de Chile I, 403). Incorporada á la sal sirve (según Ruiz y Pavón) en los casos de heridas pútridas de animales para matar las larvas de moscas que en ellas se forman. Porophyllum lineare (DC. Prod. V, p. 649). N. V. yerba del venado (se llama asi porque la planta exhala un hedor semejante al que despide la carne del venado). E. C. R. Ct. (Brasil, Urug.). Se hace tomar la infusión de esta yerba en los casos de cólico y para las enfermedades venéreas; tiene ade- más virtudes diaforéticas y antiespasmódicas. Tagetes glandulifera (Schranck, pl. rar. h. Mon. 2, t. 54). N. V. chilca (C), chilquilla (BA.), chinchilla (E.), suico (T.), manzanillo silvestre (C); en Chile quin- chigue, en el Brasil cravo de difunto. BA. E. C. Ct. R. T. (Chile, Urug., Brasil). La infusión teiforme de la yerba aromático-amargo se emplea como estomacal, canninativo, calmante, purgante, diurético y diaforético en casos de gastritis é indigestiones ; según Philippi, es muy cálida y su uso no es sin peligro. Esta yerba contiene un aceite claro y amarillo que es un remedio eficaz contra las lombrices. Es un excelente — 352 — pasto para las obejas y las cabras, pero es dañina para el ganado vacuno. Pectis odorata (Gr. Symb. n. 1227). N, V. comino ó comínito del campo, manzanilla del campo, tomillo (C). C. T. S. Los campesinos dún á beber la infusión de la yerba á los enfermos de tisis y la toman en el mate para las indigestiones, dolores de estómago, flatos, etc. GaillarcUa scabiosoidos (Benth. Hook. gen. II, 1, p. 414); syn. Cercostylos scabiosoides (Arn. ap. DC. Prod. VII, p. 293). N. V. topasaire. P. SL. SF. C. La yerba pulverizada provoca el estornudo y se usa como rapé contra la jaqueca, dolor de cabeza, romadizo, etc. Gaiüardia Donlana (Gr. Pl. Lor. n. 497)-, syn. Cephalo- phora Doniana (Hook. et Arn. in Hook, Journ. of bot. III, p. 324). N. V. sume ó zuma (C). P. C. R. (Chile). Se masca la yerba para conservar (?) la dentadura. Hymenoxys anthemoides (Cass. dict. 55, p. 278). N. V. topasaire. BA. E. C. SJ. R. Se usa de la misma manera que la Gaillardia scabio- soides que tiene el mismo nombre vulgar. * Anthernis Cotula (L. spec. 1261)-, syn. Maruta Cotula (DC. Prod. VI, p. 13). N. V. manzanilla bastarda. Yerba originaria de Europa, ahora espontánea en P. BA. E. C, etc. Se ha hecho uso de la infusión de esta plantíi contra la histeria, dolores producidos por la disenteria (también — 353 — en forma de lavativas) , contra la gota, fiebres inter- mitentes y lombrices. La yerba triturada puede usarse como rubefaciente de la piel. * ChrijsantJiemurn Parthenium (Pers. synop. 2, 462). N. V. altamisa, artemisa. Yerba originaria de Europa, cultivada á veces en la R. A., y espontánea, v. gr., en las sierras de C. Las inflorescencias y la yerba {herba ct flores matri- cariae s. parthenii) son medicinales y usadas interior- mente como excitante poderoso en indigestiones y enfer- medades del corazón, como emenagogo, contra pasmos histéricos, fiebres intermitentes y lombrices ; exteriormente contra hinchazón de los pechos y úlceras dolorosas. Se atribuye también á la planta la virtud de conservar fresca la carne por mucho tiempo y puede usarse el agua de la planta cocida para lavar heridas, etc. * Arte miña Abrotanum (L. spec. 1185). N. v. abrótano macho. Sub-arbusto originario de la Europa meridional, Asia menor, etc. ; se cultiva raras veces en la R. A. La j^erba {herba Absinthii pontici v. romani) es ofici- nal y es usada contra clorosis, supresión de la menstrua- ción, histeria y lombrices; exteriormente, para fomenta- ciones en golpes, contusiones, descoyuntamientos , etc. Las inflorescencias se usan además como especia en asados y otras viandas. Puesta entre vestidos de lana, los conserva contra las poUllas. * Artemisia Dracnnculus (L. spec. 1189). N. V. drar/oncillo, estragón. Sab-arbusto originario de la Rusia oriental y Asia cen- tral; se cultiva raras veces en la R. A. La yerba y las inflorescencias (herba et suinmitates Draounoi(li) se usaron, en tiempos pasados, contra el escorbuto y la hidropesía; ahora, solo se emplea para — 354 — sazonar viandas, encurtidos, mostaza, para la preparación del vinagre de estragón, etc. Artemisia Mendosana (DC. Prod. VI, p. 105). N. V. ajenjo, artemisa. Yerba de las Cordilleras de M. SJ. R. Los campesinos usan la infusión teiforme como carmi- nativo y estomacal. Artemisia Echegarayi (Hieren., Sert. Sanj. in Bol. Ac. Nac. Cieñe. IV, p. 42). N. V. ajenjo, artemisa. Yerba de las Cordilleras de SJ. R. Es usada del mismo modo que la anterior. Senecio vira-vira (Hieron.); syn. Senecio albicaulis var. pinnatifidus (Gr. Pl. Lar. n. 508, Symb. n. 1246 e. p., vix Hook. Arn. Gilí, in Journ. of Bot. III, p. 344!). N. V. vira-vira. P. BA. C. SL. Los campesmos usnn esta yerba del mismo modo que las especies de Gnaphalium mencionadas, que tienen el mismo nombre vulgar, y le atribuyen propiedades análogas. Senecio Hualtata (Bert. herb. n. 619). N. Y. sanguinaria (C), lampaso ó lampasiUo (Ct); en Chile hualtata. Yerba perenne en BA. E. C. Ct. T., etc. (ürug. Chile). Sus hojas se usan en Chile para deshacer tumores, principahnente subinflamatorios , para cáusticos y, em- pleadas en cataplasmas, como un emoliente ventajoso; el cocimiento de sus tallos es empleado como atempe- rante. Senecio eriophyton (C. Remy, in Gay hist. Chil. bot. IV, p. 159; Hieren. Sert. Sanj. in Bol. Ac. Nac. Arg. cieñe. IV, p. 45). N. V. sacha-coma, chacha-cuma. — 355 — Yerba de las cordilleras altas de M. SJ. R. (Chile). Los arrieros y habitantes de las sierras usan mas- cada ó tomada en infusión teiforme esta yerba y algu- nas aliadas aun indeterminadas como estomacal y estimu- lante en la enfermedad de la puna (enfermedad producida por el aire muy rarificado de las grandes alturas). Las mujeres se sirven de ella como emenagogo. Se pretende además que cura el mal de corazón. La yerba es muy aromática y contiene un aceite que es seguramente su principio activo. La recomiendo á los químicos y médicos para hacer un estudio de ella. * Caléndula officinalis (L. spec. 1304). N. V. china. Yerba originaria del Sud de Europa, se cultiva á ve. ees como planta de adorno en los jardines, etc., de la R. A. donde se halla raras veces erpontánea. Contiene una sustancia amarga la. cMendu lina . La yerba se ha usado como diaforética, aperitiva y resolutiva en la ictericia y enfermedades del útero , y las flores en fiebres nervinas y aún para curar úlceras cancerosas. En Chile usan las hojas secas de la planta en la pri- mera cura para unir las heridas pequeñas, y en infusión para lavarlas, considerándola como vulnerario. * Cnicus benedictus (L. spec. ed. I, p. 826). N. V. cardo santo. Originaria del Asia menor, etc. ; cultivada y raras veces espontánea en C. y otras provincias- La planta es muy amarga y contiene cnicina. Las semillas (aquenios) (semen carduí benedicti) son diuré ticas y se usan contra el dolor de costado. La yerba y las inflorescencias {suuinutat.es fíoridae Cardui Bene- dicti) se recetnn en 'Miíermedade^ ci'^nicas del hígado, hipocondría, histérico, catarros, etc.; la cnicina sirve -1356 - contra fiebres intermitentes. Se hace también uso de esta planta en veterinaria. * Cynara Cardunculus (L. spec. 1159). N. V. cardo de comer, cardo de Castilla. Originaria de] Sud de Europa, cultivada y á menudo espontánea en BA. C, etc. Las flores {fl. Cynai ae offícinarum) son medicinales y se recetan en enfermedades reumáticas y del hígado, en fiebres intermitentes, etc., como diuréticas y emolientes. Se comen como hortaliza los nervios de las hojas y los tallos tiernos. * Cynara Scolymus (L, spec. 1159). N. V. alcachofa, alcaucil. Su patria es desconocida ; es quizas una variedad de C. Cardunculus (L.) producida por la cuitara. Las hojas {folia Cynarae) se han usado como emo- liente y diurético en los casos de hidropesía, reumatismo de las coyunturas, sudores hediondos, ictericia, fiebres intermitentes, etc. Las cabezuelas (inflorescencias) no enteramente desarrolladas se comen de varios modos. De esta planta puede además extraerse un lindo color verde para teñir tejidos de lana y de algodón. * Silyhuní Marianum (Gaertn. fr. 2, p. 378, t. 168, f. 2). N. V. cardo asnal, cardo de Santa Maria, cardo lechero, cardo mariano. Planta anual originaria del Sud de Europa. Asia meri- dional, etc.; se cultiva y se ha puesto espontánea en las pampas de BA. E. SF., etc., donde cubre á veces gran- des espacios. Medicinales son la raíz, la yerba y la semilla (aque- nios) {radix, herba et semen Carda i Mariae). La raíz y la yerba son amargas y se ha recetado especialmente la última en fiebres intermitentes, hidropesía y enferme- dades de la vejiga; las semillas aceitosas y mucilaginosas — 357 — se emplean para las enfermedades del pecho, dolor de costado, ictericia, mal del bazo, vómitos de sangre, etc. Los campesinos usan el vilano (pappas) como vomitivo. Las hojas inferiores tiernas, la raíz y los tallos pueden comerse como hortaliza. * Centaurea CalcUrapa (L. spec. 1297). N. V. abre- puño. Yerba originaria de Europa; espontánea en BA. E, etc. La yerba y las ñores contienen cmcína y son muy amargas, como también la raíz aún que en menor grado. La raíz y las semillas {radix ct se¡nen Calcitrapae s. Carduí steUati) se han usado antes como diurético. El jugo y la infusión de las flores se ha dado en Francia para fiebres intermitentes; el primero se ha empleado exteriormente para curar los callos. * Centaurea melitensis (L. spec. 1297). N. V. abre-puño:, en Chile zizaña ó roseta. Yerba oiginaria del Sud de Europa; espontánea en muchos puntos de la RA., v. gr., C. SJ. R. Ct. El té de la yerba es muy amargo y se toma en la R. A. para el resfriado. Tiene propiedades diuréticas y dia- foréticas. Centaurea Tweedíi (Hook. et Arn., sec. det. Gr. Symb. n. 1281). N. V. abre-pufio. P. BA. E. (Urug.). Tiene también propiedades diuréticas y diaforéticas. * Carthamus tinctorius (L. spec. 1162). N. V. alazor, azafrán roriii. Planta originaria de la India Oriental; se cultiva en algunos puntos de la R. A., v. gr., C. S. Las ñores y semillas {flores et semina Cait/tarni) son medicinales y son purgantes drásticos que se usaban en — 358 — tiempos pasados contra ictericia, hidropesía, roncera y pulmonía. El aceite que contienen las semillas se usaba contra reumatismos y parálisis. Las flores (sañor) se usan en las tintorerías y contienen dos colores, uno ro- sado-rojo (llamado carlamina) y otro amarillo {a ni arillo de sajlor), se las emplea especialmente para teñir los te- jidos de seda, pero estos colores son poco duraderos á la luz. La sustancia colorante, la cartamina, se usa como cosmético. Barnadesia odorata (Gr, Symb. n. 1286). N. V. clavel. Arbusto en T. S. J. Sus flores tienen un olor agradable. El tronco sirve para combustible. Mutisia Orbignyana (Wedd. Chlor. and. I, p. 22). N. V. cliacaltuya. Arbusto que recojí en las cordilleras de Bolivia cerca de la frontera argentina, es probablemente indigeno en J. también. Su tronco es leñoso y sirve para combustible. Mutisia retrorsa (Gav. ic. et descr. V, p. 65, t. 498). N. V. vireina. P. M. SJ. R. Ct. (cordillera de Chile). Sub-arbusto trepador cuyo uso ignoro. Hyalis argéntea (Don, in Hook. et Arn. comp. I, p. 108). N. V. ■iiiaquí y rornerillo (P.); blanquilla (SL.). Sub-arbusto de una altura que llega hasta 1 metro en P. M. SL. SJ. R. Ct. (Chile). Hyalis spartioides (sec. Benth. Hook, gen. II, p. 486); syn. Apliyllocladiis spartioides (Wedd. Chl. And. I, p. 11, tab. 3 A). N. V. tola. Sub-arbusto en J. (Bolivia). — 359 — Cliaquiragua longi/lora (Hieroii.) syn. C/i. clirijsantiía var. loiiy i/lora (Gr. Pl. Lor. n. 525). N. V. azafrán de ¿a puna. Cl. T. S. Arbusto leñoso que tiene cierta semejanza superficial con el Carthamus tinotorius, de donde deriva su nombre. Ciiuquiragua Unguis-Cati (Cesati, 111. di ale. piante rae. dal Prof. Strobel •, Atti d. R. Acad. deiie sience fis. e mat. V, y estr. p. 11). N. V. uña de gato. BA. P. Ciiuquiragua erinacea (Don, trans. liii. soc. 16, p. 285). N. V. roiiierUlu. P. M. SJ. Ct. J. (Perú, Bolivía, Chile) y otras especies mas del mismo género sirven para com- bustible en lugares de puna. Cnicotlialamus Lurentzii (Gr. Pl. Lor. n. 532). T. J. Árbol de 3 á 4 metros de altura. Su madera ,es un buen combustible. Trichücline incana (Cass. dict. 55. p. 216); syn. liichenia reptans (Wedd. Chlor. and. p. 25, t. 8 B). N. V. yerba china (C), contra-yerua (SJ.j. P. E. C. SJ. R. Ct. Sgo. Las cenizas de esta yerba se usan como polvo para limpiar la dentadura. Trickocline dealbata (sec. Banth. Hook. gen. II, p. 497), syn. Ciiaetanthera dealbata (Hook. et Arn. comp. I, p. 104). N. V. yerba del corro, yerba corro. M. Ct. (cordilleras). TrichocUne plicata (Hook. Arn. comp. I. p. 103). N. V. yerba del corro, yerba corro. M. R. Ct. (cordillera). Bol. Acad. IV. 24 — 360 — El rizoma de las últimas dos especies se fuma puro ó mezclado con tabaco para los dolores del estómago. Chaptalia nukins (sec. Benth. Hook. II, 1, p. 498), syn, Leria nutans (DC. ann. mus. 19, p. 68). Pl C. T. (Am. mer., Antillas). Se emplea, según Parodi (1. c. p. 47), como resolutiva en las oftiilraías. En la India Occidental se hace uso de esta planta contra los catarros del pulmón. fruüstia puiKjcns (Poepp. exs. n. 884; Less. syn. p. 110). N. V. liuañil, palo blanco. J. (Bolivia, Chile). Proustia ilici/'oiia (Hook. Arn. comp. I, p. 166; Wedd. (Jhl. And. I, p. 23, t. 5), syn. /■'. mendocina (Phil. Sert. mend. alt. in An. Un. Chil. 1870, (Setiemb.), p. 159 ex specim. authent.). N. V. altí'pe (M.), c/illquc, chilca de Castillo (Ct.), sacha-rosa, rosa del nioiite (C), jjalo blanco (tí.). M. SL. C. SJ. K. Ct. (Chile). Dos arbustos de 3 metros de altura ^ ayor. Se reco- mienda la infusión 7). N. V. verbena. En toda la Pt. A. (Ani. nier.). Según A. Murillo (I. c. p. 616), el zumo de las hojas tiene, reunido con manteca de cerda, cualidades bien re- conocidas de antigangrenoso en los casos en que la gan- grena tiene por causa un principio de inflamación. La infusión de la planta se dá interiormente en las afecciones crónicas del hígado y, en los mismos casos, sus hojas se aplican en cataplasmas. Verbena /rispida (Iluiz et Pav. fl. per. 1, p. 22, t. 34, f. a.). N. V. verbena. C. S. J. (Perú. Chile). El té de la yerba y de las raices astringentes y amar^ gas se usa contra, la indigestión y las fiebres y, en inyec- ciones, contra la gonorrea. Verbena epited rolden (Chani. in Linnaea 7, p. 261). N. V. verbena, jaqueca-. E. C. (Urug.). Según Lorentz (Pl. Lor. n. 729), se usa esta yerba para el dolor de cabeza (?). — 409 — Verbena erinoides (Lani. ill. 1, p. 57). N. V. yerba del Incordio (R. Ct.), verbena (C), fu- maria (C); en Chile sandia laliuen\ en el Uruguay margarita morada. M. SJ. C. R. Ct. etc. (Bras. mer., Urug., Bol., Perú). La infusión teiforme de esta yerba se usa como aperi- tiva, diurética, emenagoga, para apaciguar el ardor cau- sado por la orina en enfermedades de las vias urinarias, etc. ; es además recomendada por los campesinos en las enfermedades siñlíticas y para curar la frialdad de los pies, usándose en baños que se preparan con el decoctado de esta yerba y con el de la Trixis discolor. Verbena criihniifolia (Gilí, et Hook. in Bot. Mise. I, p. 169). N. V. b i chicho. P. M. SJ. SL. R. C. Ct. Ignoro el uso que se hace de esta yerba. DuranJa Lorentzii (Gr. Symb. 1773, syn. Myiius serra- ti folia Gr. Pl. Lor. 288, t. 1, f. 4). N. V. tala blanco. T. (sierra). Árbol mediano. La madera no es buena, por que, al secarse, se raja hasta el centro del corazón. Labiatae. Ocimum carnosum (Lk. et Otto, Benth. Lab., p. 11). N. V. bergamota. E. (Bras. mer.). Ocimum Scllowii (Benth. Lab. p. 6). N. V. bergamota. E. (Am. mer.). Yerbas fragantes que podrían emplearse para la fabri- cación de perfumes, etc. Tienen calidades carminativas y diaforéticas. — 410 — * Ociinum basilicnm (L. spec. p. 833). N. V. albaliaca. Yerba originaria de la Indiu Oriental y de África; se cultiva raras veces en la R. A., v. gr., C. Es muy aromática. La infusión teiforme se ha usado como carminativa, calmante, nervina, vulneraria y diuré- tica y ha sido especialmente empleada en enfermedades de los ríñones y de las vias urinarias. El zumo fresco de la yerna se usa para las inflamaciones de orejas. Las hojas sirven de condimento culinario en salsas, encur- tidos, etc. ¡lijpíis spicata (Poit. aun. Mus. 7, p. 474, t. 28, f. 2). C. (Am. cal. , Urug.) Ihjptls pülyslachija (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. am. 2, p. 321). T. (Am. cal., Paraguay). Hyptis canesceiis (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. am. 2, p. 321). N. V. matico. E. C. T. (Am. cal.). Hyptis fasciculata (Benth, Lab. p. 130). E. (Urug., Bras. mer.). Hyptis globifera (Meyer ñ. esseq. p. 207). E. (Brasil, Guyana). Hyptis verticillata (Jacq. ic. rar. 1, t. 113). E. T. (Am. cal.). Las especies citadns del género Hyptis tienen propie- dades diaforéticas, diuréticas, carminativas y vulnerarias. Se toma la infusión teiforme en casos de catarros, contra flatos, etc.; exteriormente, es usada para lavar heridas y úlceras. * Lavandula vera (DC. fl. fr. suppl. 5, p. 398; Prod. XII, p. 145) y — 411 — * Lavandula Spica (DC. fl. fr. 5, p. 397; Prod. 1. c). N. V. de las dos: al /lu ce uní, csplici/d. Sub-arbustos originarios de) Sud de Europa, cultivados á veces en los jardines de la R. A., v. gr., C. Las sumidades floridas son emenagogas, estomáticas, ligeramente tónicas y expectorantes. Se han usado en el asma y en catarros y los campesinos sahuman con estas plantas los paralíticos y los que padecen de reumatismos; el humo, según dicen; embriaga á las palomas que se dejan entonces tomar con facilidad. Con emplastos de estas plantns se resuelven carbúnculos, etc. El aceite volátil contenido en las plantas se usa para la fabrica- ción de perftunes. * Mentha rot un difolia (L. spec. p. 825). N. V. me)ita, yerba buena, cabard-caá (Corr.). Yerba originaria de Europa, cultivada y á veces espon- tánea-en las orillas de los ríos y arroyos de diversas regiones de la K. iV., v, gr., C. T. Toda la planta tiene un olor agradable y un sabor aromático fuerte; la yerba es oficinal (llerba Menthae ro- tit ndifoliae s. albaé). Se usa la infusión teiforme para indigestiones, el mal de estómago y las lombrices. Los antiguos médicos han hecho uso de ella contra el dolor de muelas, zumbido de oidos y sordera, usándola en fo- mentaciones y cataplasmas. * Mentha piperita (L. spec. 805). N. v. ijerba mota, en Chile yerba buena, en España piperita ó peperina. Yerba originaria de Inglaterra, á veces espontánea en la R. A., V. gr., BA. P. La yerba (Herba Menthae piperitae s. piperitis), de oloi- y sabor mas aromático y fuerte (jue la de la espe- cie anterior, es oficinal. Se usa en afecciones pasmódicas del vientre, diarreas, vómito, etc., y con ella i-e fabrica — 412 — un licor y pastillas azucaradas refrescantes. Se emplea también para condimento de varios manjares. El aceite volátil {olcum Menthae piperüoe aethereum) que se ex- trae de ella es usado en casos de debilidad crónica de los ojos y en los dolores reumáticos de dientes y orejas. * Mentha oitrata (Ehrh. beitr. 1, p. 150)5 syn. M. aqua- tica var. glabrata (Benth. in DC. Prod. XII, p. 171). N. V. mote-yuyo ó yerba mota-^ en Chile bergamota. Yerba originaria del Sud de Europa; se cultiva en muchas regiones de la R. A. y se encuentra á veces espontánea, v. gr., en C. SJ. La infusión teiforme se toma para corregir la sangre y con ella se lavan Ins heridas y llagas ulcerosas. Tiene además las mismas aplicaciones que la J/. roi!unrfí/'o¿?,fl(L.). Bystropoyoii mullís (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. 2, p. 317); syn. Mintliostachys mollis (Benth. ap. Gr. Pl. Lor. n. 711 et Symb. n. 1708) et Xenopo- ma verticillatum (Gr. Pl. Lor. n. 714 et Symb. n. 1712 ex spec. authent. ! !). N. v. peperita, peperina. Sierras de C. T. (Bolivia, Perú, Ecuador). Esta yerba muy aromática contiene el mismo aceite volátil que las especies de Mentha. Se usa para aroma- tizar el aguardiente y para la fabricación de un licor. La infusión teiforme se toma para indigestiones, dolores de vientre, diarreas, vómito, etc., y los serranos de Cór- doba aseguran que la han empleado con buen éxito con- tra el cólera. El aceite volátil podría extraerse para ser usado como el de Mentha piperita (L.) en casos de de- bilidad crónica de los ojos y dolores reumáticos de las joreas y de los dientes, etc. * Origanum. majorana (L. spec. n. 824). N. V. mejorana, almoradux en España; orégano en Chile y R. A. — 413 — Sub-arbusto originario de la Europa nieridional, del Asia menor, etc., cultivado raras veces en la K. A. La yerba florida (herba cu ni ¡¡orilms Majoranae v. Ama raí v. Sampsnc/ii) contiene un a.c:iite y es oficinal; cataplasmas hechas con la yerba ó el aceite extraído de ella se usan exteriormente contra ñatos, cólica é infartacion de la leche en los pechos de recien paridas ; el polvo de la yerba se emplea para el romadizo de nariz (especial- mente de los párvulos mezclándolo con nranteca ó grasa) y como estornutatorio. Se cultiva también para ser em- pleado en la cocina, ijsándose para sazonar comidas de carne. * Satureja hortcns/s (L. spec. p. 795). N. V. ajfdrca. Yerba anual originaria del Sud de Europa, del Asia menor, etc.; se cultiva á veces en la R. A. La yerba aromática (herba Satarejae liortcnsis s. sa- tiime) es oficinal y tiene propiedaal> de lanza, palo de lata, virará, ibaiú. T. S. O. Ch. (Parag.). — 434 — Árbol elevado y grueso, de 14 metros de altura mayor y cuyo tronco llega á 75 metro de diámetro. Su madera se emplea para fabricar yugos, timones de arados, cajas de armas para los soldados, etc. Ruprcc/it/a fanifolia (Meissn. Fl. bras. fase. 14, p. 58; Gr. Symb. n. 512); syn. R. Cruo/erii (Gr. in Fl. Wcst- ind. isl. p. 710). N, V. duraznillo. Arbusto en O. Ch. (Arn. mer. cal. Antillas). Ruprechüa triflora (Gr. Symb. n. 513). N. V. duraznillo colorado. Arbusto ó árbol bajo en S. O. Ch. La madera de estas dos especies es buena para traba- jos de torno. Ru'prechtia polystachya (Gr. Symb. n. 514). N. V. palo de lanza, lanza blanca, chiraznilln blanco. T. J. O. Ch. Arbusto alto ó árbol mediano. La madera es buena y se usa como la de R. excelsa, principalmente para cabos de Janza para los soldados, cajas de armas, etc. Ruprechtia Virarú (Gr. Syml). n. 515). N. V. virarv, ivirá-ró. E. Urug. Árbol de 10 á 12 metros de altura mayor. Su madera es muy estimada para la fabricación de carros y otros trabajos. Ruprechtia saíicifolia (C. A. Meyer in Mem, Acad. St. Petersb. 6. ser. 6, 148; Fl. bras. fase. 14, p. 55, tab. 27). N. V. matO' negra, ibirá-ró. E. Corr. (Urug., Bras. mer.) Arbusto ó árbol de una altura mayor de 6 á 7 metros. La madera es de buena calidad, pero el tronco no se cria muy grueso. — 435 — Cytlnaceae. ■Prosopanche Burmeisteri (De Bary in Abhandl. Nat. Gesell. Halle 10, t. 1, 2 et in Bull. Soc. bot. France. V. 15, p. 20); syn. Hijdnora americana (R. Br. in Linn. Soc. v. 19, p. 245). N. V. homjo (i\ causa de su semejanza superficial con verdaderos hongos), O. SJ. R. Sgo. (especialmente en los alrededores de terrenos salados). Vive como parásito sobre las raices de los algarrobos blancos y negros {Rrosopis alba y nigra). La pulpa de la fruta madura es dulce y tiene un olor parecido al de la pina {Ananasa sativa). La comen los loros y otras aves, las cabras, los cerdos, etc. Aristolochiaceae. Aristolochia macroura (Gómez, in Act. olyss. 1812, p. 77. c. ic. et Observ. botan, med. II, p. 27, t. 4). N. V. ipc-mi (sign. pato pequeño), patito, buche de pavo ; en el Brasil jarrinha. Ch. Corr. (Parag., Bras. mer.). La raiz de esta especie se usa como ale-xifármaco con- tra las mordeduras de animales venenosos, principalmente de víboras. Se toma el decoctado de ella y se ponen ca- taplasmas hechas con la raíz triturada en el punto donde el animal venenoso ha mordido ó picado. Se receta ade- más interiormente el decoctado contra fiebres tifoideas y se emplean cataplasmas hechas con la raíz para sanar úlceras malas y heridas en estado de descomposición. Aristolochia Giberti (W. Hook. in Bot. Mag. 18C2, t. 5345). N. V. ipé-mi, patito, buche de pavo. Corr. (Parag.). — 436 — Áristoloclüa fimhriata (Cham. in Liniiaea 183-2, p. 210, t. 6, f. 2). N. V. patito. BA. E. (Urug., Bras. mer.). Aristüluc/da parviflora (Gr. Symb. n. 890). T. Aristolochía argentina (Gr. Pl. Lor. n. 350; Symb. n. 889). N. V. charrúa ó citar ruga. C. Sgo. Aristolochía angusti folia (Cham. in Linnaea 1832, p. 211, t. 5, f. 2). E. Ct. S., etc. (ürug., Bras. mer.). Todas estas especies tienen probablemente virtudes se- mejantes á las de A. maoroura. La raíz de la .1. ar- gentina tiene seguramente propiedades diuréticas y dia- foréticas. Los campesinos curan la perlesía con los gajos triturados y, unida con grasa caliente, usan dicha raíz en imgU(3nto para curar los dolores reumáticos, Piperaceae. Pipcr Siebeñ (Cas. DC. in Prod. XVI, 1, p. 248); syn. Enckea Sieberi (Miq. ill. in Nov. Act. Leop. 19, Suppl. t. 65). T. S. J. O. Corr. (Parag., Brasil, Antillas). Árbol ó arbusto bajo. La raíz tiene quizas virtudes sialagogas, diuréticas, odontálgicas y alexifármacas, por la razón que ciertas especies aliadas poseen dichas pro- piedades. Pipcr aduncum (L. spec. p. 41); syn. Artanthe adunca (Miq. in Comm. phyt. p. 49, t. 4, f. 1; syst. p. 449; in Mart. Fl. Bras. fase. 11, p. 46). O. (Am. cal.). Las inflorescencias y las hojas tienen propiedades ate- — 437 — nuantes, resolutivas, odontálgicas, digestivas, y se usan especialmente en el Brasil en los casos de gonorrea, dolor de muelas é indigestiones. Pipe)- lanceifolium (Kth. in Humb. et Bonpl, nov. gen. et spec. am. v. 1, p. 49); syn. Artant/ie lanceaüfolia (Miq. Syst. p. 433; Illustr. p. 75, t. 79 et in Hook. Lond. journ. bot. v. 4, p. 455). O. (Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia). Las hojas de este arbusto ó árbol bajo tienen propie- dades estípticas y son semejantes á las de Fiper angiis- tifolium ó del verdadero incaico (ó toho-tohu) del Perú. Recomiendo también á ios médicos de la R. A. hacer ensayos con esta planta en enfermedades venéreas y en todos los casos en que se emplea el matíco del Perú. Peperomia ínaequali folia (Ruiz et Pav. Fl. per. v. 1, p. 30, t. 46 a.). Sierras de S. (Perú, Venezuebí, Bolivia). Peperomia poly.stachya (Miq. syst. p. 116). T. (Parag. Am. cal.). Peperomia reflexa (A. Dietr. sp. V., 1, p. ISO). T. S. J. O. (Am. cal., Cabo de Buena Esperanza, Asia mer., Australia, etc.) Yerba epífita en los árljoles de las selvas subtropicales. Las hojas y tallos de estas tres yerbas son aromáticas y contienen una especie de aceite volátil; poseen proba- blemente propiedades estomacales, antiespnsmódicas y nervinas. Laurineae. Ocotea sitaveolens (sec. Benth. Hook. gen. III, p. 157) syn. Stryc/inodap/ine suaveolens (Gr. Symb. n. 784) et Oreodap/me suaveolens (Meissn. in DC. Prod. XV, 1, p. 136). N. V. laurel blanco, laurel amarillo, O. Ch. Corr. (Bohvia; Parag.). — 438 — Árbol elevado de las selvas sub-tropicales. Las hojas son aromáticas y tienen propiedades diuréticas, carmina- tivas y emenagogas. Su madera es amarilla y aromática pero pierde pronto el color; es menos compacta y mas liviana que la de la Nectandra porphyria (Gr.), pero se deja labrar con facilidad y es mas adecuada para la fa- bricación de muebles y otros trabajos de carpintería. Nectandra angusli folia (Nees. in Linnaea VIII, p. 48; syst. p. 298), var. fa'ci folia (Nees 1. c). N. v. laurel. E. (ürug., Brasil). Árbol ó arbusto pequeño. La madera es tenaz, firme y se usa para varios trabajos. Nectandra porphyria (Gr. Pl. Lor. n. 305, Symb. n. 785), syn. A^. amara var. australis (Gr. Symb. n. 787, non Meissn. ap. DC. Prod. XV, 1, p. 158 en spec. authent.), N. V. laurel de la falda, laurel negio. T. S. J. O. Ch. Corr. Árbol de mucha elevación (hasta 20 metros) cuyo tronco tiene un diámetro que llega hasta un metro. Su madera es firme, tenaz, amarilla y de corazón negro. Ptesiste mucho tiempo en el agua y no se pudre cuando se halla constantemente cubierta por ella. Por este mo- tivo es usada con provecho para trabajos de puentes, pi- lares, tablones de embarcación, etc.; se emplea además para tirantes, muebles, etc., pero no sirve para obras expuestas al sol porque se raja entonces fácilmente. La madera seca tiene, comparada con la fresca, mucho menos volumen que ésta y puede decirse que al secarse pierde la cuarta parte de su volumen primitivo. La madera fresca tiene un mal olor que pierde una vez seca. Pulida tiene cierta semejanza con la de noijal {Juijlans regia y /. australis), pero es fácil distinguirlas una de otra por- — 439 - que, en estado pulido, la de laurel negro tiene sus vetas largas mas oscuras y alternadas con otras mas claras. * Laurus nobüís (L. Hort. Cliff. p. 155). N. V. laurel (genuino). Árbol originario del Asia menor, se cultiva como planta de adorno en algunas comarcas de la R.A., v. gr,, BA. C, etc. Las hojas se emplean como condimento para ciertas comidas de carne, etc., y ellas, como también las bayas, son excitantes y aromáticas. El aceite volátil (oleum aeíhereum et uníjuinosum Lauri) que se extrae de las bayas se usa contra la parálisis, la sarna y las sabandi- jas, y para embalsamar cadáveres. Las hojas frescas sirven para confeccionar una pomada usada por los vete- rinarios. Thymelaeaceae. Daphnopsis Legu iza monís (Lorentz, Veg. del N. E. de la Prov. Entre-Rios p. 69) ; syn. D. racemosa (Gr. Symb. n. 783). N. V. ivirá. E. Corr. (Urug.). Árbol pequeño ó arbusto cuyo tronco alcanza el grosor de 10 á 15 centímetros de diámetro. La corteza propor- ciona una hebrilla muy resistente y estimada para atar varas de techo, etc., y, según dicen, mas resistente que el cuero de vaca. Loranthaceae. Loranthus cuneifolíus (Ruiz et Pav. Fl. Peruv. III, 46, t. 276 b.). N. V. liga, liquilla. E. C. SJ. R. Ct. Sgo. T. S. J. O. Ch., etc. (Am. mer.). Es un arbusto parásito muy común en la R. A.; se halla á veces en número considepible de individuos en- Bol. Acad. IV. 29 — 440 — cima de los árboles y arbustos, asi que llega á ser da- ñino para ellos y los hace secar. Ha sido hasta ahora observado en los siguientes árboles y arbustos cultivados ó indígenos en la K. A. : Acacia bonariensis, A. Aroma. A. Cávenla. A. Visco, Atamisquea emarginata, As pidos- ■perma Quebracho blanco, tíiUnesia Retamo, Celtis Sello- ■íüiana. Celtis Tala, Duvaua longifolia y otras especies del mismo género, Gourliea decorticans, Jodina rhombi- l'olia, Larrea cuneifolia, L. divarica, L. nitida, Lithraea GiUlesii, Mackaerium Tipa, Maytenus viscifolia, * Olea europaea, * Piras communis, Prosopis alba, P. nigra. P. adesmioides, * Robinia Pseudo- Acacia, Ruprecidia coryli- folia, Zuccagnia panctata. Este parásito contiene una sustancia gomosa {viscina), con la que los campesinos untan varillas para cazar pájaros y matar moscas. Las hojas trituradas se emplean en cataplasmas para las fracturas de huesos y se asegura que hacen muy rápida- mente verificar la soldadura. Loranthus verticillatus (Ruiz et Pav. fl. peruv. III, 47; Eichl. in Fl. Bras. fase. 44, p. 47). N. V. liga, pupusa. SJ. R. Ct. J. (Chile, Perú, Bolivia). Es parásito (arbusto), según mis observaciones, solo en las especies de Davaua\ según Lorentz, se le encuentra también en especies de Prosopis y Celtis:, en el Perú, se cria en Colletia crenata.. Loranthus ligustrinus (Willd. Herb. n. 6958; Schult. Syst. Vil, 130 in nota, nec Wall.). T. (Brasil). Arbusto parásito observado solo hasta ahora en Sc/tmí- delia edulis. Loranthus acutifolius (Buiz et Pav. Fl. Per. III, 48, t. 274 b.). S (Perú.) — 441 — Arbusto parásito que, si no me equivoco, se cria en especies de Eugenia-^ en el Perú, se le ha encontrado también en * Citrus aurantium. Loranihus eugenioides (Kth. in Humb. et bonpl. nov. gen. et spec. am. III, 435; ic. ap. Eichl. in Fi. Bras. fase. 44, t. 12). Ct. S. (Perú, Bolivia, Brasil). Es árbol pequeño ó arbusto que quizas en el primer tiempo de su desaroilo es parásito en raices de otros ar- bustos ó árboles. Loranthus flagellaris (Cham. Schlecht. in Linnaea III, p. 213; Eichl. Fl. Bras. fase. 44, p. 51, t. 13). N. V. ligo, quintral. C. R. Es arbusto parásito en Acacia Cavenia, Aspidospciina Quebracho blanco, Celtis Sellowiana ó Gourliea decorti- cans, Prosopis Padesmioides, P. alba y nigra. Loranthus uruguensis (Hook. Arn. Bot. Mise. III, 358) ; syn. Struthanthus complexas (Eichl. ex. ic. et descr. Fi. Bras. fase. 44, p. 73, t. 21). E. C. Sgo. (Urug. Bras. mer.). Es arbusto parásito en Celtis Sellowiana, especies de Prosopis, Zizgphus Mistol etc. Todas las especies citadas de loraní/w/ 5 contienen tam- bién viscina y pueden emplearse quizas del mismo modo que el L. cunei folias. Plioradendron holoxanthuní (Eichl. Fl. bras. fase. 44, p. 116). N. V. liga. C. Ct. J. (Bras. mer.). Arbusto parásito en Celtis Sellowiana. > Phoradeiidron rubrum (Gr. Fl. Brit. W.-Ind. 314; Pl. Lor. 360; ic. Eichl. Fl. Bras. íasc. 44, p. Í20, t. 38, f. 2). — 442 — C. Ct. R. S. J., etc. (Parag.). Arbusto parásito en Mimoseas v. gr, Prosopis adesmi- üides, Mimoso, carinata y en Bulnesia Retamo. l-horadendron chrysostachijuhí (Eichl. ap. Gr. Plant. Lor. n, 361). T. Es arbusto parásito en C/iuiicoa triflora. Todas las especies citadas de Phoradendron contienen viscina. Eubracliioii Arnotti (Hook. f. Fl. Antarct. II p. 291 in nota); syn. E. hrasilicnse (Eichl. Flor. Bras. íasc. 44, t. 44) et Viscuin ambii/iíuin (Hook, et Arn. Bot. Mise. III, 85(3), T. E. (Urug. Bras. mer.). Es arbusto parásito en arbustos y árljoles pertenecien- tes á la familia de las Mirtáceas, v. gr. Eugenia Mato, E. uniflora, E. punr/ens etc. Santalaceae. Arjona patagónica (Hombr. et Jaquin. in Vog. pole Sud t. 15: Hook. fl. ixntarct. 2, p. 342) ; syn. A. tuberosa (Cav.) var. patagónica (A. DC. Prod. XIV, p. 627). N. V. macachin. P. Los tubérculos de esta yerba son comesti l)les y de gusto dulce. Jodina rliombifoUa (Hook. Arn. Bot. Mise. III p. 172). N. V. quebracho flojo (C), sombra del toro, sombra del toio macho (T.), peje (C. SJ. SL. M.) quinclnliii ó qtiinchirin (C). M. SL. ('. SJ. K. Ct. T. (Urug.). Árbol que tiene hasta 8 metros de altura mayor, ó ar- busto mas bajo. Su tronco llega á un diámetro de '/^ metro. — 443 — De la fruta se extrae un aceite con el que los campe- sinos curan los bubones y las llagas venéreas. Las hojas y los tallos se dan en infusión para los- constipados. La infusión teiforme de las hojas frescas se toma en los ca- sos de iudi<4estion. Se atribuye á su corteza la virtud de curar la disenteria : se córtíi en rebanadas delgadas una onza de la parte interna (floema) de la cortezíi y, ponién- dola en una vasija conveniente, se hace hervir con un cuartillo de agua en la que se hace disolver V2 onza de azúcar quem;ido y después, tapando lo mas hermética- mente posible la mfusion, se deja enfriar. Si la enfer. medad es grave, dicen (lue puede administrarse este medicamento al enfermo á cualquiera hora y que en otros casos, debe esperarse para tomarlo en ayunas. Las can- tidades indicadas son para una sola toma. Aseguran que repitiendo tres veces este remedio, desaparece todo síntoma de disenteria. (V. A. Espejo: una excursión por la sierra de Córdoba p. 123). La madera sirve para varas de techos de paja, ejes de carreta, etc. AcanthosyHs spíiiesccns (Gr. Symb. 899); syn. Osyris spi 1 1 escons (Eichl. in Fl. bras 13. 1, tab. 53). N. V. quebrochillo, sombra ¡Id toro hembra, yvd lielié (sign. del guaraní: fruta dulce). E. Corr. Arbusto ó árbol de 7 á 8 metros de altura mayor. La fruta es muy dulce y comestible. La madera es de un color amarillento, dura, fina, y en ella no se perciben poros. Se usa con preferencia para muebles. Acniíthnsyrls fa lenta (Gr. Symb. n. 900). N. V. sombra del toro hembra. T. S. O. J. Árbol de una elevación (pie llega hasta 12 metros y cuyo diámetro del tronco tiene hasta V2 uietro. Las tVu- — 444 — tas del tamíiño de los damascos y parecidas á estos son muy dulces, casi demasiado, y no pueden comerse en cantidad ; son empleadas para hacer aguardiente. La ma- dera es de mediocre calidad; el campesino le dá varios destinos, v. gr., yugos para bueyes, soleras y varas para los techos de paja. Eiiphorbiaceae. Euphorhia piluUfera (L. am. oc. 3, p. 114). N. V. yerba de la golondrina, lechera, de la- golon- drina. E. C. Ct. T. S. etc. (zona cal.). Se usa esta yerba como diurético; en el Brasil se em- plea en casos de mordeduras de serpientes y en la Indiy Oriental contra las aftas. Euphorhia hypericifolia (L. Hort. Cliff. 198). T, (Am. mer. y central, Antillas). Euphorhia lasiocarpa (Klotzsch, Nov. Act. nat. cur. XXX, suppl. p. 414). C. Ct. S. (Am. mer. xVntillns). Euphorhia Brasiliensis (Lam. dict. 2, p. 423). T. S. (Brasil). Euphorhia Lorentzii (MüU. Arg. ap. Or. Symb. n. 847). C. Ct. T. Euphorhia ovalifolia {^wgeAm.. ex. Kl. et Gke, Trie. p. 26). M. E. C. Ct. T. (ürug., Chile). Euphorhia serpeas (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. am- 2, p. 41). BA. E. C. Ct. R. T. (Am. cal. y templ.). Todas estas yerbas tienen tnmbien el n. v. de lechera ó yerha^ de la golondrina. Son diuréticos y se toma la infusión teiforme en casos de menorragia y flores blancas. El jugo lechoso de las especies mencionadas y otras mas del mismo género se — 445 — usai) contra callos, verrugas y para curar los herpes. Cataplasmas de la yerba, v. gr., de E. /lydercifolia y E. Brasüiensis, se usan en el Brasil contra úlceras sifilíticas. Eupliorb'ui port'ulacoides (Spreng. syst. 3, p. 792). N. V. leche-tres, leche terna, leche tresna (C.) en Chile pichoa. BA. M. E. C. Ct. T., etc. (Chile, Urug. Bolivia). Algunas gotas del jugo lechoso tomadas en el caldo y la infusión teiforme de los gajos se usan como purgante y diurético, especialmente en las enfermedades de las vías urinarias. * Euphorbia Peplus (L. spec. 658). Yerba originaria de Europa^ introducida y á veces es- pontánea en terrenos cultivados. Se ha usado antes en Europa como purgante para la hidropesía. Euphorbia papulosa (St. Hil. Ic. Pl. us. t. 18). E. (Urug., Bras. mer). Está empleada como purgante en el Brasil. * Euphorbia Lathyris (L. spec. p. 655). N. V. tártago, contrarayo. Yerba originaria de la Europa meridional ; se cultiva á veces y se encuentra en raras ocasiones como espontánea. Las semillas se han usado como eméticos y purgantes y contra la sífilis para sustituir la ipecacuana. Se obtiene de ellas un aceite diáfano y de gusto suave que ha sido usado para sustituir el aceite de Crotón en casos de constipaciones, cólicos y también contra la tenia. El jugo lechoso y las hojas de esta se usan de la misma manera que los de otras especies de Euphorbia para curar callo?, verrugas y el dolor de muelas cariosas. Phyllanthus acuminatus (Vahl. Symb. 95; ic. ap. Müll. Arg. in Fl. Bras. fase. 61, t. 7, í. 2). J. O. (Am. cal.). — 446 — Es arbusto de 2 á 6 metros de altura ; es muy aliado al /Vi. Piscatonnn (Kth.) y se usan sus gajos como los de este para ponerlos en el agua y ensordecer (em- barbascar) pescados. Phyllanthus Sellowkmus (MüU. Arg. in Linnaea v. 32, p. 37). N. V. surandi blanco. E. (Urug. Bras. mer.). Arbusto de 3 á 4 metros de altura. Ignoro su uso. P/iyllanthus Niniri (L. spec. pl. p. 1392). BA. T. S., etc. (zona cal.). La raíz de esta yerba es astringente y amarga, se usa en el Brasil como específico contra la ictericia y la y(írba como remedio diurétiío en enfermedades de los ríñones y de la vejiga, disenteria, cólico, menstruación anormal, etc. La yerba y las semillas se usan en casos de diabetes. Jatropha excisa (Gr. Pl. Lor. n. 111; Synib. n. 2^7). N. y.sncha-/ti/jHL'ui, higuerüa de piñuiies, higuei'on, treinta y tres, pifión. C. Ct. Jatropha mac/rocarpa (Gr. Pl. Lor. n. 112). N. V. sacha higuera. Ct. Jatropha Wedelliana (Baill. Kec. d'obs. bot. vol. 4, p, 267). N. V. pííion. manihot. J. O. Corr. (Parag.). Las semillas de estas tres yerbas son purgantes y eméticos y los campesinos saben hacer uso de ellas. De J. excisa se suministran hasta 33 semillas, de donde de- riva el nombre vulgar: treinta y tres. Jatropha Curcas (L. spec. pl. ed. I p. 1006). N. v. pifión (S.), pifión del Paraguay, tártago ó — 447 — higuera infernal (Corr.); en el Brasil pinfwtro de purga ó manduvi-guazú. S. O. Corr. (Am. cal.). Contiene un jugo lechoso caustico (ácido jatrófico). Se usan las semillas (en número de 3 á 4) que son un drás- tico purgante y emético muy fuerte con el que debe te- nerse mucho cuidado, siendo venenosas tomadas en dosis mayores. El aceite {aceite de higuera infernal) que puede extraerse de las semillas es análogo en sus pro- piedades al aceite de Crotón tigliutn, pero sus efectos son mas violentos ; se ha usado para la hidropesía, íleo, perlesía crónica, contra lombrices, y se ha apHcado exte- riormente en casos de enfermedades crónicas del cutis, parálisis, como también en fricciones sobre el vientre como antihelmíntico y además para quemar. Las hoj;is se emplean para cataplasmas emolientes y detersivas sobre úlceras, para excitar la secreción de la leche á l^s puérperas y como depilatorio. El cocimiento de las raices es purgante y se u>a contra la ictericia (según Parodi ens. bot. med. Arg. p. 7). El antidoto ó contraveneno en envenenamientos con la planta es el vino y todas las be- bidas alcohólicas en general. Cnidoscolus vitifolius (Pohl. Pl. bras. ic. et descr. v. I, p. 61, t. 52) syn. Jatropha vi tifo lia. (Miú\. Arg. in DC. Prod. XV, 2 p. 1096) a; genuina (Müll. Arg. 1. c. 1097.) T. (Brasil), y su var. repandus (Gr. Symb. n. 293). C. S. N. V. ortiga de piñones, (S.) cerraja (T.). Todas las partes de este sub-arbusto tienen pelos que- mantes y puede hacerse de ellas el uso que se hace de C. quinquelobus (L.) para vesicatorios y urticaciones. El jugo lechoso y las semillas aceitosas de esta planta son purgantes. — 448 — Cmdoscolus Cnicodendron (Gr. Symb. n. 294). N. V. piñón de ortiga, cerraja árbol. S. J. O. Es árbol de 6 á 8 metros de altura mayor. Las semillas y el jugo lechoso de las hojas son pur- gantes drásticos. Crotón sarcopetalus (Müll. Arg. ap. Gr. Pl. Lor. n. 114). C. S. O. Crotón tiicwnanenms (Gr. Pl. Lor. n. 115). T. (Parag.). Crotón saltensis (Gr. Symb. n. 299). S. Son sub-arbustos ó arbustos pequeños. Las semillas de estas tres especies que son aliadas al Crotón Tiglnim (L.) poseen virtudes purgantes y contienen un aceite gra- soso. Crotón andinus (MttU. Arg. in Linnaea v. 34. p. 126.), S. (Bolivia). Sub-arbusto que exhala un fuerte olor aromático y po- see quizas alguna virtud medicinal. Crotón Urucurana (Baill. Rec. d'obs. bot IV, 3; Müll. Arg. in Fl. Bras. fase. 61, p, 111, t. 22). E. Corr. (Brasil, Parag.). Crotón succirubrus (Parodi Ens. bot. med. arg. p. 86). E. Ch. Corr. (Misiones), (Parag. Brasil). Árbol de hasta 8 metros de altura. Estas y otra especie más aliada á las dos citadas y que se cria en O. y en Bolivia y está determinada eró- neamente por el Sr. Grisebach (Symb. n. 297) con el nombre científico de C. tarapotensis, tienen el n. v. árbol de sangre de drago. De lastimaduras casuales é incisiones hechas á propósito en la corteza del tronco y que penetran hasta el liber (floema), fluye un Uquido, de color rojo subido, que deja un residuo resinoso cuando se evapora y deseca — 449 — al calor del sol y en contacto con el aire. Este producto es conocido en el Norte de la R. A., en Bolivia, etc., bajo el nombre vulgar de sangre de drayo y los indígenos le atribuyen las propiedades medicinales de que gozaban las resinas antes oficinales llamadas con el mismo nombre vulgar y que derivan de algunas especies de CaLainus, Pterocarpus Droco y Dracoena Draco. Crotón myriodont'K s (Müll. Arg, in Pl. Lor. n. 118). N. V. cambalacho, sanalotodo. Sub-arbusto oloroso en las sierras de C. Los serranos le usan contra las enfermedades sifilíticas pero ignoro de que modo se emplea y cuales son sus pro- piedades medicinnles. Crotón pauperulus (Müll. Arg. in Regensb. Flora 1864, p. 485). N. V. nof/al del zorro. C. Ct. Sgo. T. S. Crotón subpannosus (Gr. Pl. Lor. n. 121); syn. Jnlo- croton subpannosus (Müll. Arg. ined.) y su variedad dentosns (Hieren); syn. C. dentosus (Gr. Pl. Lor. n. 122) et Julocroton serratus (Müll Arg. ind.). N. V. bálsamo del campo. E. C. T. S. Se usan contra los humores sifilíticos cataplasmas he- chas con los gajos machacados. Crotón lobatvs (L. spec. pl. ed. 1, p. 1005). y var. ¡)al- matus (MúU. Arg. Prod. XV. 2, p. 668). E. C. S. (Urug. Bras. mer.). Las semillas son purgantes. Argit/iamnia catamarcensis (Hieren.); syn. Apliora cata- mar censis (Gr. Symb. n. 322). Ct. Sub-arbusto pequeño que contiene el principio de una sustancia colorante semejante al añil (de especies de — 450 - Indígofera). El floema* (cá^c-u'a blanda interna, entre- cáscara) de la raíz y del tallo se tiñe en poco tiempo, cuando está expuesto al aire, de un color vivo azulado ó violado. Quizas pueda extraerse este color de un modo semejante al que se emplea p;ua prepiir;!r el añil. Reco- miendo á los químicos ha;j;an un estudio exacto sobre esta planta. * ManiJiot. utilisslnia (Pohl, Pl. bras. ic. et descr. 1, p. 32, t. 24, incl. var. b. y c.)- N. V. mandioca, mandió. Yerba originaria quizas de las Iirüns Orientales, ahora cultivada en todos los países cálidos, en la R. A., en J. O. Ch. Corr. La raíz gruesa, que llega á veces á tener el peso de muchas libras, contiene un jugo lechoso muy venenoso pero que se pierde cuando ha sido cocinada ó tostada. Se pierde igualmente el veneno con la extracción del almidón blanco é inodoro {ta piuca, mandioca) que ella contiene, que se vende en el comercio europeo bajo el nombre de arraw-mot del Brasil y es un poderoso nutri- tivo de fácil digestión. Cuando están criando las señoras, lo toman generalmente en agua caliente con un poco de azúcar para aumentar la secreción láctea. Como polvo cosmético para la cara es superior en calidad al almidón de arroz. El modo de obtener el almidón de esta plnnta es reducir á pulpa sus raices despojadas de la epidermis, lo que se consigue exprimiéndolas por medio de rollos; dejando en reposo el zumo, se precipita la fécula que después de lavada con agua se deja secar al sol. En el Gran Chaco se hace de este almidón una especie de pan ó biscocho llamado chipa. También se comen en lugnr de pan las raíces tostadas ó cocidas. En algunas partes de Sud- América se comen Ins hojas como legumbre y hasta el jugo lechoso (del que basta y 2 dracma para — 451 — matar á un hombre) es cocinado con pimienta por los indios brasileros y usado para salsas de comidas de carne; hacen también una bebida que embriaga con el jugo crudo y fresco fermentado. La raíz cruda y fresca se emplea en cataplasmas sobre las úlceras purulentas y podridas. Las semillas son purgantes y provocan el vómito. Manihot anisophylla (Hieron.); syn, Janipha anisophylla (Gr. Pl. Lor. 113). N. V. liiguerilla. E. C. Ct. S. Las semillas son purgantes-drásticos y tienen propie- dades eméticas. Acalijpha cordobensís (Müll. Arg. in Pl. Lor. n. 135). N. V. alba/taquilla ó yerba de San Vicente (C). E. C. y seguramente en otras provincias más. Se usa el decoctado de la yerba para lavar heridas y tajos grandes y se emplean en cataplasmas hechas con ella para cubrirlos. * Ricir-us cuiniiiunis (L. spec. plant. ed. 1, p. 1007 excl. syn. pr. p. et. var. b.); syn. R. glaucus (Hoíf- mannsegg, Verz, d. Pflanzencult Nachtr. p. 199). N. V. tártago (C), palma Cristi, las semillas piojos del diablo; en Chile higuerilla. Yerb:i, de una altura que llega hasta 2 metros, origi- naria de África (?), cultivada y como espontánea en C. T. S. J. O., etc. (Méjico, Brasil, ürug., Chile). Tres ó cuatro semillas machacadas y emulsionadas producen un efecto purgativo. El aceite que se obtiene de las semillas (aceite de castor ó de ricino) es un pur- gante que se usa mucho en medicim. Se emplea además este aceite pnra fines técnicas de la industria. El dococ- tado de la raíz se usa contra la cólici, dolores de ríñones, etc. Los cogollos y racimos tiernos bien machacados y — 452 — cocidos se emplean para cataplasmas en ciertas enferme- dades cutáneas, barros y manchas pecosas del cutis, abscesos y enfermedades de los ojos. Las hojas mojadas en vinagre frió y aplicadas en la frente y en la cabeza son un poderoso refrigerante en las cefalalgias ocasiona- das por la acción solar ó cualquier otro movimiento de sangre ha.cia el cerebro. Las hojas han sido también re- comendadas para sustituir á las de la morera para la cria de los gusanos de seda. Algunas otras especies del género Riel mis se cultivan á veces oomo plantas de adorno en jardines, quintas, etc. Se usan como el Ricinus communis. Tragia volubüis (L. spec. pl. ed. 1, p. 980). E. T. S. J. etc. (Am. mer. cal., Antillas). La raíz es un medicamento diurético. Sapíum aucuparium (Jacq., Select. stirp. amer. hist. p. 249. t. 15S), var. petíolare (Gr. Symb. n. 342). O. var. salid folium (Kth. in Humb. et Bonpl. Nov. gen. et spec. 2, p. 65). Sgo. Ct. T. S. (Colombia), var. stenophyllum (Gr. Symb. sub. n. 342). BA. E. Corr. (Urug., Bolivia, Perú). N. V. lecherón (T.) árbol de leche (E.), curupí (E. (Corr.), curupi-cay, pega-pega (Corr.). Árbol mediano de 8 metros de altura mayor ó arbusto mas bajo. Posee una savia blanca, lechosa, pegajosa y muy vene- nosa que, sin embargo, se usa contra úlceras sifilíticas, elefantiasis, verrugas, etc., mientras que el extracto de las hojas ha sido empleado para sustituir al acónito (es- pecies de Aconíhom) y al zumaque venenoso (Hhus Toxi- codendrun) contra los reumatismos crónicos, gota, perlesía, nevralgia facial, ciática, etc. La madera es blanca, blan- — 453 — da, liviana y excelente para obras de carpintería, pero no sirve para hacer carbón. Los indios del Gran Chaco saben usarla para las puntas de sus flechas y se dice que las lastimaduras hechas por ellas tienen un efecto mortal en caso quede algún pedazo de madera en la he- rida. Sapiaiii marginatum (MuU. Arg. in Linnaea v. 32, p. 120); syn. Excoecaria marginata (MüU. Arg. in DC. Prod. XV, 2, p. 1208, non. Grt. !) C. (sierra), (Bras. mer.). Arbusto bajo leñoso. Excoecaria margínala (Gr. Pl. Lor. 129). N. V. blanquillo (E.) talilla (C). E. C. (Urug. Bras. mer.). Árbol ó arbusto de hasta 5 metros de altura mayor. La madera del tronco es de un valor secundario pero sirve para postes de cercos, pilares de ranchos, etc. Excoecaria hippophai folia (Gr, Symb. n. 339). E. (Urug.). Arbusto ramoso de 3 á 4 metros en su altura mayor. Actinostemon anisandrus (Hieron. ; syn. Dactylostemon anisandrus (Gr. Symb. n. 340). N. V. leche-leche. O. Arbusto ó árbol bajo leñoso. Colliguaja integerrima (Gilí, et Hook. in Hook. Bot. Mise. V. 1, p. 140, t. 39). N. V. coligua y. P. M. R. (Chile). Arbusto de 1 á l'/a metro de altura. Colliguaja brasilíensís (Müll. Arg. in Linnaea vol. 32, p. 126). N. V. palo de leche, lecherón. C. E. (Urug., Bras. mer.). — 454 — Árbol de 4 á 6 metros de altura y cuya madera es liviana. El jugo acre, blanco, lechoso y pegajoso de estas plan- tas se usa contra verrugas, callos y el dolor de muelas cariosas. Urticaceae. * Utmus campestiis (L. spec. 327) y * Ubniís cffiísa (Willd. prod. fl. berol. n. 296). N. V. olmo. Arboles originarios de Europa; se cultivan raras veces en la K. A., pero se crian bien en terrenos regados aún en las provincias de clima algo seco, v. gr., en C. Sus maderas son muy estimadas para carros y carre- tas, obras de carpintería, etc. La corteza interna (floema) {corlex Ulml interior) se usa como tónico astringente, especialmente para las secreciones pituitosas, fiebres inter- mitentes, enfermedades del cutis, etc ; antes, la raiz y las hojas se usaban también en medicina. La corteza sirve además para curtir y teñir de color amarillo. En Rusia se han usado las hojas nuevas como sucedáneo del té. En Noruega, para hacer pan, se mezcla corteza de U. t'/'fusa pulverizada con la harina al tiempo de amasarla. Celtis Sello wiana (Miq. in Fl. Bras. fase. XII, p. 179, t. 63). N. V. tala árbol, tala blanco, tala crecido. BA. E. SF. C. Ct. R. T. S. J. O., etc. (Bolivia, Bras. mer., Urug.). Árbol que alcanza á la altura mayor de 8 á 12 metros, según crece en terrenos mas ó menos secos ó húmedos, y cuyo tronco llega á tener hasta medio metro de diá- metro. La raíz se usa para teñir color café. Con las hojas se prepara un té que obra contra las afecciones del pecho y las indigestiones ; se pretende también que la infusión de las hojas cura ios constipados mas recrudecí- — 455 -- dos y pertinaces. Cuando el cólera azotó la provincia de Córdoba, se curaron muchos personas con dicha infu- sión. Las frutitas son comestibles. La madera es fuerte y se usa para ejes de carretas, postes para casas, cabos de herramientas, látigos, etc., es también empleada por los torneros y es un buen combustible. Celtis Tala (Gilí, in Planch. Ulmac, in Ann. des se. nat. 1848, p. 410); syn. Celtis Tala, a. Gilliesiaua (Planch. in DC. Prod. XVH, p. 191). N. V. cliurqui-tala, tala arbusto. BA. E. C. SL. Ct. K. etc. (ürug.). Celtis jlexuosa (Wedd. in Ann. se. nat. ser. 3, v, 18, p. 195), y la variedad glabrl folla (Gr. Symb. n. 475). O. (BoUvia). Celtis boUvietisis (Pl. in Ann. se. nat. 184S, p. 311). T. S. O. (Bolivia). Celtis chicha pe (Miq. in DC. Prod. XVII, p. 191). S. O. (Bolivia). Celtis diffusa (Planch. in Ann. se. nat. 1848, p. 314). T. O. (Bohvia, Brasil mer.). Celtis tarijensis (Pl. ap. Gr. Sjmib. n. 481). Las cinco últimas especies mencionadas tienen el nom- bre vulgar común de tala gateador. Son arbustos ó árboles bajos. Las hojas se usan como las de C. Sellowlana en infusión teiforme para las indi- gestiones, descomposturas del estómago, etc. Son buenas maderas, pero el tronco no se cria muy grueso y se hace uso de él para cabos de herramientas ú otros fines seme- jantes y como combustible de buena calidad. * Hurnulus Lupulus (L. spec. 1457). N. V, lúpulo, en España además luplo, hombrecillo, betlgiiera, vldarria . Yerba trepadora originaria de la Europa setentrional; Bol. Acad. IV. 30 — 456 — en la R. A. se la cultiva muy raras veces, v. gr., en C. (se ha heclio un ensayo) y no en grande esc;ibi hasta ahora, aunque la planta se cria bien en los terrenos ade- cuados. Recomendamos su cultura, especialmente en las partes meridionales y en los valles de las sierras. Las inflorescencias fructíferas (coni s. strcbuli Lupuli) son cubiertas con pelos glanduliferos que pueden sacarse en forma de polvo amarillento llamado lupitlina. Tienen una fragancia aromática y un sabor amargo. Se usaban antes exteriormente en medicina (en cataplasmas) y también interiormente (la infusión teiforme) contra indi- gestiones, dispepsia, reumatismos, escrófulos, etc. Ahora, solo se emplea la lapulina., que contiene un ácido (¿í¿.joi¿- lito) y un aceite volátil, como estinmlante y diurético en casos de disuria, enfermedades de la vejiga, poluciones nocturnas, sífilis, etc. La raíz de la planta ha sido pre- conizada antes como un sustituyente de la zdrzaparilla. Los brotes nuevos se comen preparados como los espár- ragos y las ttbras del tallo pueden emplearse para la fa- bricación de tejidos, cordeles y papel. Con el nitrato de bismuto, los gajos suministran un color amarillo para te- ñir la lana. De mucha importancia y muy conocido es el empleo que se h-ice de las inflorescencias fructíferas para la fabricación de la cerveza. * Cannabis sativa (L. spec. p. 1457). N. V. cáñamo, barujue de la India, hascldsck de los Árabes. Yerba originaria de la Asia templada ; se la cultiva raras veces en la R. A., v. gr., en BA., 8F. Las semillas {semina Caanabisj y los gajos floridos {siimmitates 6'rt/i/ia/>¿s), son oficinales. Las semillas se em- plean para orchatas calmantes, son usadas especialmente en casos de enfermedades de la vejiga y de las vias uri- narias, como también exteriormente para cataplasmas ca- — 457 — li entes mucilaginosas. Contienen un aceite grasoso y he- diondo que sirve en la industria y con ellas se engordan pájaros. En el Oriente se cultiva una forma de la planta que apenas puede llamarse variedad {C. indica Lim.) y que posee propiedades narcóticas muy pronunciadas. Sus gajos floridos se usan para la fabricación de ciertas ma- sas .y extractos que, tomados, producen un efecto embo- rachador, semejante al del opio. Uní. de estas masas (esrar) se emplea también para fumar en el Oriente. El abuso continuo del liaschisch es aún mas peligroso que el del opio y produce demencia. El principio narcótico es una especie de resina amorñi (cauabina ó /lasc/iischina) y además un aceite etéreo. Los gajos floridos como igual- mente las masas y los extractos que se preparan con estos, se hnn introducido también en la medicina y se han dado interiormente con buen éxito en lugar del opio como hipnótico, y como sedativo en casos de cólera, té- tano, afecciones catarrosas del pecho, demencia y de enve- nenamientos con estricnina. Se supone que la bebida llamada nepenthes de los antiguos griegos y egipcios se preparaba con las semillas ó con la yerba del cáñamo, El cáñamo es de mucha importancia para la industria como planta textil, porque las fibras de sus tallos cons- tituyen uno de los mejores materiales conocidos para la fabricación de tejidos que son muy duraderos y para la de papeles de superior clase. Recomendamos á los agricultores de la R. A. hacer ensayos en escala mayor con la cultura de esta planta útil. * Broussonetia papyrifcra (Vent. Tabl. du Régne vég. 3, p. 547). N. V, papelero, morera de papel, moral de la China. Árbol de una altura de 8 á 15 metros, originario de — 458 — las islas del archipiélago índico, etc.; se le cultiva aunque raras veces en la R. A., v. gr., BA. E., y solo como ár- bol de paseo á causa de su follaje hermoso. En el Japón se fabrica papel con las fibras de la corteza y sombreros ordinarios en Taiti. Las frutitas no tienen un sabor muy agradable, pero no obstante son comestibles. Madura mora (Gr. Symb. n. 482). N. V. mora. O. Ch. Corr. (Bolivia. Parag.). Árbol alto de 15 á 20 metros cuyo tronco llega á tener hasta un metro de diámetro. La madera es amarillenta, pesada y fina, pero una vez trabajada pierde su color para tomar otro oscuro se- mejante al de la caoba ó maliogoni {Swíüteiiia Maha- goiii L.). Es muy apropiada para muebles y se hace uso de ella para mazas y demás piezas de carretas. De la corteza y de la madera se puede fabricar un color ama- rillento útil para la tintorería. * Moras alba (L. spec. 1398). N. V. mora blanca, morero. Árbol de una altura mayor de 6 á 8 metros, cuyo tronco alcanza á un diámetro de '/^ metro. Es oiiginario de la China, etc.; se han hecho experimentos para culti- varlo en la K. A. con el fin de criar con sus hojas al gusano de la seda. En China se usa la corteza de la raíz como diurético, vermífugo y resolutivo, y el zumo de las hojas es em- plado como vulnerario y febrífugo. Las hojas se emplean para teñir de color amarillo. Las frutas son comestibles, se dan á comer y se emplean para gárgaras en la infla- mación de la garganta. La madera es de buena clase y es especialmente empleada por los torneros. * Morus nigra (L. spec. 1398). N. V. mora negra. - 459 - Árbol originario de Persia; se cultiva en la R. A. aun- que no con mucha frecuencia. La corteza de la raíz es purgante y antihelmíntica; el jugo que dá se usa para el dolor de muelas. Las hojas sirven también para criar el gusano de seda. Las frutas son resolutivas y atemperantes, de sabor mas agradable que las del árbol precedente y con ellas se hace un arrope. La madera tiene el mismo empleo que la del árbol anterior. Dorstenia brasil iensis (Lam. Encycl. Bot. 2, p. 317). N. V. contra yerba del Perú, higuerilla, taropé (Corr.); en el Brasil caá-piá. E. Corr. (ürug. Brasil). Esta yerba posee una fragancia débil, aromática, íigrn- dable y su sabor es acre y astringente. La raíz (radix Contrayervae) es tónica, emética, diurética, diaforética y estimulante. El zumo de las hojas y de las raíces macha- cadas se aplica sobre mordeduras de serpientes y picaduras de escorpiones, insectos, etc., como también sobre toda llaga mala. Tomado, el cocimiento de las raices hace brotar las viruelas, el sarampión y otras enfermedades cutáneas que por íalta de abrigo se hubiesen entrado; ayuda también á hacer venir la menstruación. Es además usado como remedio contra la disenteria y las fiebres tifoideas. * Ficus Carica (L. spec. 1513). N. V. higuera. Árbol de hasta 8 á 10 metros de altura, originario del Asia menor, África setentriunai y Europa meridional. Es muy cultivado en la R. A. y se ha puesto espon- táneo en algunas sierras, v. gr., Sierra de Córdoba. Las frutas dulces y agradables, de las que se conoce un gran número de variedades, se comen frescas y dese- cadas. En medicina se usan como emohente para garga- — 460 — rismos y, en casos de apostemas de la dentadura, como laxantes y pectorales. Con ellas se labrica en Europa una masa que se emplea para aditamento á los frutos de café, y aguardiente. El jugo lechoso de los gajos es purgante y sirve para destrui)' verrugas. El decoctado de las hojas frescas sirve para teñir de un color amarillo- rojizo. La madera es buena para muebles y trabajos de torno. Con los gajos pueden confeccionarse cestos, canas- tos, etc. Ficvs subtriplínervia (Mart. herb. fl. Bras. n. 504); syn. Urostü/ma subt'-iptijiervinni (Miq. in Fl. Bras. fase. 12, p. 99). N. V. af/arra-palo. E. Corr. (Bras. mer., ürug.). Según Lorentz, es un árbol vistoso que tiene hasta 15 á 16 metros de altura; germina en los troncos, etc., de otros árboles, hojas de palmera, etc., y echa sus raices aéreas al suelo, desarrollándose á veces una copa tan abundante que suprime enteramente á aquellos. Contiene un jugo lechoso que se ha querido emplear para caiUchuc. * Urtka urcns (L. spec. plant. p. 1396). N. V. ortiija (C), rwpa chica (Ct. R.), caá-poropi (Corr.) Maleza originaria de Europa y Asia, ahora común en toda la R. A., especialmente en terrenos entregados á la cultura. Las hojas se han usado interiormente contra los flujos de sangre, la tisis y la gota; exteriormente, para sacudir miembros paralíticos (urticacion) y reumá- ticos, irritar la piel y producir una revolución saludalde de la sangre. La raíz y las semillas se usan para las lom])rices y la disenteria. Las hojas nuevas pueden comerse preparadas como espinacas. Las fibras de los tallos se usan en Europa para la fabricación de tejidos muy finos que son aún mas apreciados que los de fibras de lino. — 461 — Urtica cchinata (Benth. Pl. Hartwrg. p. 252). S. (cordillenis de Boliva, Chile y Perú). Urtica spathulata (Sniith, in Rees' Cyclep. 37. n. 17). BA. C. (Urug., Brasil mer.).; y otras especies mas del mismo género pueden probable- mente usarse en medicina como la (Jrti.ca urens. Urera haccifvra (Gaudich. Rot. Vog. Uran. p. 497). N. V. ortiga grande. T. S. etc. (Am. cal.). Sub-arbusto cuyas hojas causan escozor al tocarlas, lo que hace casi impenetrable el monte donde crece en abun- dancia. Boehmeria caudata (Swartz Prod. 34; Fl. Ind. occid. p. 279). T. S. J. O. (Am. cáL). Las hojas, en el Brasil, se ponen en el baño al tiempo de tomarlo para calmar los dolores producidos por almor- ranas. Paretaria debilis (G. Forst. Fl. ins. austr. prod. n. 387). N. V. parietaria, ociicha. BA. E. C. Gt. S. etc., (yerba casi cosmopolita, pero que no existe en Europa). En el pais, se usa esta yerl)a como diurético, febrífugo y anodina. Cocida, es aplicada en cataplasmas sobre los tumores dolorosos, y el decoctado de ella se administra en lavativas. Se dice que esta planta esparcida sobre montones de maiz, trigo ó arroz, ahuyenta los gorgojos. •Fuglandeae. * Juglans regia (L. spec. 1415). N. V. nogal común, noguera. Árbol originario de Persia, Georgia, etc., que se cria hasta una altura de 20 metros y cuyo tronco llega hasta — 462 — mas de 1 metro de diámetro. Es cultivado en muchos puntos de la R. A. y á veces es espontáneo en algunos valles de ciertas sierras. El pericarpio de las frutas no maduras verdes (puki- men nucis Juglandis) contiene una sustancia amarga y en dosis pequeñas facilita la digestión, mientras que to- mado en mayor cantidad es emética y purgante \ su ex- tracto se hq usado contra enfermedades escrofulosas, la sífilis, herpes crónicas, úlceras, flores blancas, lombrices, etc. La infusión de las hojas se ha aplicado al exterior y también interiormente para escrófulas. Las pepitas de las nueces se comen, contienen mucho aceite, sirven para emulsiones, etc. Este aceite, (pie pronto se pone rancio, se ha usado en este estado contra la tenia y contra la hidrofobia; sirve igualmente en casos de herpes, quema- duras, para auinentar el crecimiento de los cabellos (?), etc. Las frutas no maduras se usan para confeccionar dul- ces y ciertas salsas inglesas digestivas para acompañar á la cariip en las comidas. Las pepitas (los embriones de la planta) de las nueces maduras son comestibles ; el aceite fresco puede usarse para acomodar ensaladas, etc., para el alumbrado y para fabricar un excelente barniz. El jugo del tronco, que puede extraerse haciéndole inci- siones ó agujeros con un taladro durante la primavera, contiene una especie de azúcar. Con la corteza, las hojas y frutas no maduras se fabrica un color pardo-amari- llento. También se usa la corteza para curtir. La ma- dera es una de las mas apreciadas para muebles, culatas de escopetas, trabajos de escultura, puertas, pértigos de carreta, etc.; tiene vetas muy hermosas, pero necesita mucho tiempo para secarse. Se consigue secar artificial- mente la madera con mas prontitud, si antes se la pone algún tiempo en agua ó so deja expuesta al vapor de agua. — 463 — Juglans australis (Gr. Symb. n. 538). N. V. nogal silvestn', nogal cayuri. T. S. J. O. (Bolivia?). Árbol de 15 metros de altura mayor y cuyo diámetro del tronco llega hasta 1 metro. De las nueces (cocos), que son mas pequeñas y tienen la cascara mas dura que las del nogal cultivado {Juglans regia) pero que sin embargo tienen también pepita comes- tible, se alimentan los cerdos montaraces ó jabalis (Dico- tyles torquatus) (Cuv.). La madera es de muy buena clase, pero como la del nogal necesita muchos años para secarse. En Tucuman, donde ya no abunda mucho este árbol, se la usa ahora exclusivamente para muebles; acepillada y pulida, toma un color negro brillante. Antes se usaba para tirantes de azoteas y construcción de casas. Estos tirantes de casas antiguas, cuando se destruyen estas, son buscados con preferencia por los carpinteros, por lo que se encuentran en estado muy seco. Esta madera es, según dicen, superior para la escultura á la del nogal común. Casiiarineae. * Casuar ¡na glauca (Sieber Herb. N. Holl. n. 325). Árbol que alcanza á una altura de 25 metros, máximum. * Casuarina quadrivalvis (La Bill. Nov. Holl. spec. 2, p. 67 t. 218). Árbol que alcanza á una altura que llega hasta 18 á 20 metros. * Casuarina stricta (Ait. Hort. Kew. 3. p. 320, non Willd. sp. 4, p. 19, nec Miq. Rev. p. 53). Árbol mediano ó arbusto alto. * Casuarina suberosa (Otto et Dietr. Allg. Gaitenzeit, 1841, p. 155). Árbol de 12 á 14 metros de altura. — 464 - * Casuarina equisetifoLia (Forst. Gen. pl. austr. p. 103, f. 52). Árbol muy alto que alcanza de 45 á 50 metros de altura. * Casuarina (/lauca (Sieber Herb. N. Holl. n. 325). Árbol cuya altura mayor llega á 25 metros. Con estas y aún con otras especies mus del género Casuarina, originarias todas de Nueva-Holanda ó de algunas islas del archipiélago austral, se han hecho ensa- yos de cultura, especialmente en las provincias del Litoral. En las del Centro, he observado ejemplares de alguna altura solo de C. stricla. Todas serán de mucha impor- tancia, junto con el Eucalyptus f/lobiUus, cuando se procederá sistemáticamente con la plantación de árboles en los vastos territorios de las pampas argentinas, por que estos árboles, á mas de crecer con cierta rapidez, ofrecen maderas duras y firmes de excelente clase, especialmente para la fabricación de muebles finos, enchapados, etc. La corteza de C. equiselifolia es un astringente poderoso y los indígenos de Nueva-Zelanda la usan para la enfer- medad llamada bcri-bcri (enfermedad especial que también se observa en el Brasil). Los gajos de C. (¡uadrivalvis tienen propiedades refrigerantes y, en Tasmania, se usan mascados contra la sed y también para cataplasmas en casos de inflamaciones, etc. Ciipiilíferae. Alnus ferruginea (Kth.) var. Aliso (Gr. Pl. Lor. n. 201). N. V. aliso. T. O. (Bolivia). Árbol de un tamaño que no pasa de 15 á 16 metros de altura y cuyo tronco crece muy recto. La madera blanca y blanda es de buena calidad y es usada para puertas, toda clase de muebles, enmaderados de casas, tablazón de buques, etc. ; resiste por mucho tiempo á las influencias del agua y no se pudre fácilmente. — 465 — §alicineae. * Salix babylonica (L. spec. n. 1473). N. V. sauce llorón, sauce blanco-^ en España desmayo, sauce de Levante. Árbol originario de Asia, muy cultivado en la R. A., especialmento para afianzar los bordes de los rios, etc.; pero, según mis observaciones, existen solamente indivi- duos femeninos en la R. A. Crece hasta una altura de 16 á 20 metros y su tronco alcanza á veces á un diámetro de mas de 1 metro. La madera es liviana, blanca, blanda y de buena clase para obras de carpintería, etc. En Asia se usa el decoctado de las flores y de los gajos tiernos, tomado como té, contra la tisis y las fiebres intermitentes; se acostumbra exteriormente para lavar úlceras. La corteza contiene salicina que se ha usado para sustituir á la quinina. Con los gajos pueden fabri- carse canastos. Salid' HumbüUUiana (Willd. spec. pl. 4, p. 657). N. V. sauce común, sauce colorado. Árbol abundante y frecuente en las orillas de los rios de toda la R. A. y que también es cultivado para afian- zar á estas. Su altura mayor alcanza á 12 metros y su tronco á un diámetro de un metro. La corteza contiene salicina y en la R. A. se usa el decoctado contra fiebres intermitentes (chucho) y, además, en la tintorería de la lana para teñir de color rosa. La madera es tan útil como la de la especie anterior y se emplea á los mismos fines. El carbón en polvo es conveniente para la fabri- cación de cohetes y otros fuegos artificiales. * Populus nir/ra (L. spec. n. 1464), var. pyrarnidalis (Spach, Rev. Popul. in Ann. se. nat. 1841 p. 31). N. V. álamo ó chopo de Italia, álamo ó chopo de Lombardia. Árbol originario del Oriente, de 25 á 30 metros de — 466 - altura mayor y de 7^ á 7» metros de diámetro en el tronco. Su cultura es muy esparcida en la R. A. La corteza y las hojas contienen populina y salid na y se han usado contra fiebres intermitentes, dolor de caderas, etc. Las yemas que son revestidas con una sustancia resinosa y balsámica, se han usado antiguamente contra catarros y encogimientos de la uretra, enfermedades de la vejiga, hemorragias pasivas, etc. Ahora, se usan solo para la fabricación de un ungüento que se emplea para curar almorranas inflamadas. La madera es blanda y se usa en car]:)interia para el torno y en la construcción de casas para cumbreras, varas de techos, etc. Las hojas y gajos, después de cortados y secados, son un buen alimento para las cabras, ovejas y otros animales. * Populus canadensis (Desf. Cat. hort. Par.). N. V. álamo de la CaroUna. Árbol de 14 á 24 metros de altura, originario de la América setentrional y cuya cultura se propaga en la R. A. aunque raras veces se hallan árboles de alguna edad. La madera puede emplearse para los mismos usos que la del álamo común. La corteza y las hojas contie- nen también salicina y populina. Onetaceae. Ephedra monticola (Miers, Contr. II, p. 116, t. 75 B.); syn. E. americana (Gr. Symb. n. 1774 e. p., non Willd. !). N. V. tola (J.). Ct. J. (Chile). Ephedra duntosa (Miers, Contr. II, p. 168, t. 77 A). N. V. tramontana, pingo-pingo. Cordilleras de la R. (Chile). Ephedra ochreata (Miers, Contr. IL p. 169, t. 77 B). N. V. fruta del bicho, fruta de quiriquincho. P. BA. M. SJ. R. — 467 — Ephedra americana (Willd. sp. pl. 4, p. P60; icón. Miers, Contr. 11, t. 78 A). N. V. pingo-pingo, frutilla del campo. Sierras de C. K. Ct. (Perú, Chile, Ecuador, Colombia). Ephedra rupestris (Benth. Pl. Hartw. p. 253); syn. E. am,ericann (Gr. Symb. n. 1774 e. p.)- N. V. tramontana de la puna. T. (sierra), (Ecuador). Ephedra Tweediana (Fisch. Meyer. Mem. Acad. Petrop. V. 99, t. 9, ic. Miers. Coutr. II, t. 78 B.). N. V. pico de loto, pico de gallo (C), tramontana (C. Ct.), fruta de quiriquincho (P.), cupard (en la lengua de los indios del Rio Negro). P. BA. M. C. R. Ct., etc. (Urug., Bras. mer.). Ephedra frustiUata (Miers, Contr. II, p. 174, t. 79 B.). N. Y. pingo-pingo. P. SJ. Ephedra triandra (Tul. in Ann. Se. nat. IV. ser. n. X, 115; ic. Fl. Bras. fase. IV, p. 408, t. 107). N, V. tramontana. E. Ct. etc. (Urug., Bras. mer.). Son arbustos bajos. La infusión de los gajos se usa para el empacho de los niños, es diurética y se toma como antiblenorrágica. El decoctado de las raices y gajos se usan contra la gonorrea, y el té de la raíz se toma para enfermedades sifilíticas. Los campesinos las usan en forma de cataplasmas para los casos de fractu- ras de huesos. Aplicando para lavar los enfermos la in- fusión cálida de estas plantas, dicen que se retira la frialdad. Las frutas de E. Tweediana, E. ochreata, E. triandra y quizas de otras especies mas, son comestibles aunque no tienen un sabor agradable. Las raices de E. Tiveediana se usan (según Lorentz, Cuadro de la Veg. de la Rep. Arg., p. 100) para la tintorería. — 468 — A más de las mencionadas, existe en la Sierra Fama- tina una especie aún no descrita del género Epliedra. Coníferae Libocedrus cliilensis (Endl. Conif. p. 44). N. V. ciprés. P. (Chile). Arbusto alto ó árbol que alcanza á una altura de 17 á 25 metros. La madera es de color amarillo, excelente para muebles finos, enchapados, etc. * Cupressus lusitanica (Mili. Dict. n. 3; icón, in Eichl. fl. bras. fase. 34, t. 113, f. II); syn. C. glauca (Lam. dict. 2, p. 243). .N. V. ciprés de Goa, cedro de Goa, ciprés ó cedro de Portugal. Árbol originario de las Indias Orientales ; se cultiva á veces en la R. A. donde se cria bien, y se recomienda la propagación de su cultura. Alcanza á una altura de 12 á 16 metros. * Cupressus sempervirens (L. spec. pl. p. 1422) y su variedad b. horízontalis (Parí, in DC. Prod,); syn. C. horízontalis (Mili. Dict. n. 2). N. V. de la forma genuina ciprés común ó hembra de la variedad ciprés del Levante ó ciprés macho. Árbol originario del Asia (sierras de Busih, al poniente de Herat, Kabul, Afganistán, etc.), alcanza á una altura de 25' á 28 metros. Se cultiva á veces en la R. A. y se cria bien aún en las provincias de clima seco. Las frutas, la corteza y la madera han sido antigua- mente oficinales {nuces, cortex et Hgnum Cnpressi) y empleadas como astringente para diarreas v enfermeda- des del pecho ; se usan aún en Turquia. De la madera puede extraerse un aceite volátil {oleurii Cupressi aethe- reum) que se recomienda en casos de lombrices y ha sido usado para conservar las colecciones de objetos de — 469 — ciencias naturales contra los insectos y larvas que los destruyen. Recomiendo la cultura en grande escala de las dos es- pecies citadas, de Cupressus por su madera preciosa, dura, aromática y muy duradera, que sirve para la cons- trucción de buques, muebles, cajones de diversas clases, trabajos de escultura, etc. Probablemente, se prestan algunas otras especies mas del mismo género para ser cultivadas en el país. Bodocarpii angusti folia (Parlat. in DC. Prod. XVI. 3, p. 512). N. V. pino. T. S. O. J. (sierras) ; (Bolivia). Árbol mediano que crece muy derecho y cuyo tronco grueso llega á tener mas de ^¡2 metro de diámetro. La madera es buena y se usa para varas y soleras de techos, trabajos de carpintería, etc. Araucaria brasüiana (A. Kich. in Dict. class. d'Hist. nat. 1, p. 512). N. V. pino de las Misiones, curi ó curiy, curi-yva\ en el Brasil pinheiro. Corr. (territorio de las Misiones). Árbol de grandes dimensiones que alcanza generalmente á una altura de 25 á 3ü metros, y aun de 50 metros á veces; la circunferencia del tronco mide hasta 6 metros. La madera amarilla es de muy buena calidad. La corteza segrega una resina aromática que se usa en vez de trementina. Las frutas son comestibles, sabrosas y sirven también para engordar el ganado. * Pinus lialepensis (Mili. Dict. n. 8, Ic. t. 216). N. V. pinrj. Árbol originario de Grecia y del Asia menor que alcanza á una alura de 16 metros; se cultiva relativa- — 470 — mente poco en la R. A., v. gr., C. T.; pero es ,un árbol de madera excelente que en Grecia se usa principalmente para la construcción de buques; es por esta razón que debe ser especialmente recomendada su cultura, tanto mas que es un árbol que viene bien aún en los terrenos secos. De la resina de este árbol ya ha hecho uso Hipó- crates para enfermedades de las mugeres. * Fínus Pinea (L. spec. pl. p. 1419) N. V. 'pino real, pino doncel, pino de piñones. Árbol originario de la Europa meridional y del África setentrional que tiene de 15 á 25 metros de altura y se cultiva raras veces, aunque se cria bien en las pro- vincias del Litoral. Sus semillas son comestibles y se usan en medicina para emulsiones en enfermedades inflamatorias. La cor- teza fué recetada en la antigüedad por los médicos griegos contra ñores blancas y úlceras. * Pinus Pinuster (Soland in Ait. H. Kew. ed. 1 v. 3 p. 367). N. V. pino bermejo, pino negral ó nevral. Árbol originario de la Europa meridional-, alcanza á una altura de 20 á 25 metros y se cria bien en las provincias del Litoral. Produce una clase de trementina (la de Burdeos). El hoUin de la madera se usa en Europa para la preparación de la tinta de imprenta y para la pintura. La corteza {cortex Pini marUimae) se ha recetado con buen éxito en casos de enfermedades de los ríñones y de la vejiga, escorbuto, almorranas, etc. * tinas australis (Michx. Arbr. 1, p. 02, t. 6); syn. P. palustris (Mili. Dict. n. 14). N. V. pino de Virginia, pino tea (en España, este último nombre vulgar se emplea para la P. cana- riensis Ch. Sm.) Árbol de 18 á 2Ü metros de altura, originario de Norte- — 471 — América, especialmente Virginia donde se cria en mucha abundancia en territorios relativamente estériles (y no cenagosos como lo indica el nombre científico sinónimo citado). Este árbol produce trementina {terebínthina alba s. americana). Los troncos rectos son muy adecuados para mástiles de buques. La madera es muy resinosa pero excelente, y constituye un artículo valioso para el comercio. Quizas se preste bien esta especie para ser cultivada en grande escala en el vasto territorio de las pampas Argentinas, pero no tengo conocimiento que se haya hecho todavía algún ensayo de plantación en escala mayor. * Pinus Strobus (L. spec. pl. 1419). Árbol que tiene hasta 60 metros de altura ; es originario de Norte- América (Canadá, etc.) y se cria bien en las provincias del Litoral. La madera, de color blanco, es muy útil. Se la extrae también una especie de trementina, pero de valor secun- dario. Además, existen aun muchas otras especies del género Pinus recomendables como árboles útiles y con los que podrían hacerse ensayos de plantación en regiones del país que carecen de bosques. Hay muchas especies que son adecuadas para los parages fríos de las sierras de Patagonia, etc., como también otras que necesitan un clima mas templado y de las que algunas se crían bien aun en lugares estériles y secos. Casi todas las especies son útiles porque tienen buena madera, la que general- mente es recínosa. Alismaceae. Sagittaria montevidensis (Cham. Schl. in Linnaea 2, p. 156). N. V. achira ó saeta. En todas las provincias de la Ri. A. (Urug., Bras. mer.). Bol. Acad. IV. 31 — 472 — Yerba acuática, cuyas hojas y rizomas tienen virtudes rubefacientes y refrigerantes, y han sido recomendados contra la epilepsia. Las hojas machacadas se aplican en forma de cataplasmas para hernias recientes. La planta constituye un buen pasto para las cabras y los animales caballares y vacunos. Typhaceae. Typha domingensis (Pers. syn. 2, 532). N. V. totora. BA.. M. SL. (Antillas, Am. mer.). Typha angustí folia (L. spec. 1377). Existe según Parodi (Ens. bot. med. arg. p. 94) en la R. A. (Chile, Europa, Am. seten.). N. V. totora, espado/íia ; en Chile paja de estera; en España enea. Los toneleros se sirven de las hojas para ponerlas entre las duelas de los barriles; con ellas se hacen, este- ras, jergones y asientos de sillas. Son también emplea- das para techos de habitaciones rústicas. Los rizomas feculentos son astringentes y diuréticos y se usan contra la disenteria, la gonorrea y las aftas. En Ptusia son co- midos puestos en vinagre. Los pelos de los írutitos se usan en Enropa contra sabañones. Las plantas contienen iodo. Aroídeae. Lcmna gihba íL. spec. 1377). E. C. S. O. etc. (casi cosmopolita). Lemna valdiviana (Phil. Linnaea v. 33, p. 239). T. S. O. (América setentriond y merid.). ¿ ' ' 'o/// I li'z'i L. sp:^c. 1377). E, etc. (casi cosmopulita). N. V. lentejas del agaa. Algunas especies de Lemna han sido oficinales y usa- — 473 — das como remedio refrigerante para la gota y el reuma- tismo. Todas las especies componen un buen pasto para cerdos, gansos, patos, gallinas, etc. Asterostigma vermitoxlcum (Gr. Plant. Lor. n. 752; Symb. n. 1797). N. V. sac/ia-col, mata-vaca. C. T. Esta plfinta que contiene un zumo cáustico, principal- mente su rizoma tuberculiforme, es venenosa para los animales vacunos y caballares. Los arrieros usan los tubérculos desecados y pulverizados para poner en las heridas de los animales con el fin de preservarlos contra las moscas que quisieran depositar en ellas sus larvas y para matar estas cuando se encuentran ya en dichas heridas. Spatlúcarpa sagüti folia (Schtt. sec. Gr. Symb. 1798). N. V. saciia-col. J. (Brasil). Los tubérculos de esta planta^ que también es venenosa, tienen las mismas aplicaciones que los de Asterostigma vermitoxicum. Palmae. Copernicia cerífera (Mart. Palm. p. 242 t, 50 A. et in D'Orbig. voy. Am. mer. 7, p. 41, ati. 1. 1 I, 3, et t.XXIV. N. V. palmera de tedio, carandahi ó carandaí (en guarani), queíc (en el idioma de los indios Tobas. O. Ch. Corr. (Boüvia, Parag., Brasil). Es palmera de mucha altura, que se cria en las cerca- nías de los rios grandes y de las lagunas en terrenos que sufren á veces inundaciones. Se hace uso del co- gollo que se come cocido en el puchero. En el Brasil se extrae una harina ñna de la médula del tronco, como también de las semillas grasosas, la que se mezcla con leche para fabricar una bebida refrescante. Las hojas — 474 — segregan una cera vegetal con la que, en Londres, fabri- can velas. Las fibras de las hojas se emplean para la fabricación de sogas, esteras, escobas, sombreros, canas- tos, etc. La parte interna de los pecíolos de las hojas se usa para tapones de botellas. Las raices tienen seme- janza con las de las zarzaparillas y han sido sustituidas á ellas. La madera es buena para obras de carpintería y se emplea especialmente para vigas. Tritlirinax brasiliensis (Mart. Palm, p. 150, t. 104). N. V. caranda, carranday (E.); saho ó utsalio (en el idioma de los indios Guarayos de Bolivia), kuai- chicli (en Chiquitos). E. Corr. (Bohvia, Brasil). Palmera de 4 á 5 metros de altura. Las hojas se usan para hacer abanicos y escobas y sus fibras para la fabricación de sombreros. TritJirinax campestris (Drude et Gr. Symb. n. 1802); syn. Copeniicía campestris (Burmeister, Reise durch dic La Plata-Staat. II p. 48). N. V. palmera, palma. C. SL. en terrenos relativamente secos, v. gr., valles de la sierra. Palmera que alcanza apenas á una altura de 6 metros y que es generalmente mas baja. La fruta es muy dulce y sirve de alimento para el ganado. El aguardiente que se destila do las frutas fermentadas es, según dicen, de mejor paladar y mas saludable que el de la uva. De la pepa de las frutas se extrae, después de trituradas y aprensadas con agua caliente, una especie de aceite. Las vainas fibrosas de las hojas que envuelven la cir- cunferencia del tronco, se usan para filtrar agua ú otros líquidos que contienen cuerpos extraños. Con las hojas pueden fabricarse escobas y abanicos. Los troncos son empleados para postes de corrales, etc. — 475 — Acrocomia total (Mart. palm. p. 78). N. V. bocajay, bocaya ó alebocaya (Corr. en lengua guaraní y guarayo), totai (en el idioma de los indios Chiriguanos), orotoaich (en Chiquitos). Corr. (Parag., Bolivia. Brasil). Palmera que llega hasta 15 y mas metros de altura. El cogollo se come crudo con vinagre y aceite y tiene entonces un gusto de nuez de coco, ó cocido en el puchero, siendo entonces su sabor semejante al de los espárragos. Las frutas son muy dulces, comestibles y con ellas se hacen aguardiente y una especie de vino; son también muy buscadas por los animales, especialmente por los cerdos. Las pepas ó cocos se comen igualmente, sea crudos ó tostados, y contienen un aceite grasoso que puede extraerse de ellas. El tronco no sirve para com- bustible, pero los peciolos de las hojas se emplean para este fin. De la médula del tronco, saben los indios del Gran Chaco extraer una especie de harina dulce que les sirve para alimento en ios tiempos de inundaciones extraordinarias en que, á veces, pierden sus cosechas de maiz y otras plantas alimenticias. Esta misma harina? haciéndola fermentar con agua, emplean dichos indios para la fabricación de una bebida alcohólica. Cocos YcUay (Mart. Palm. Orbign. p. 93, t. 1. f. 1, t. 30 C). N. v. yatay (en el idioma de los indios guaranís, sign: palmera menor). E. Corr. (Parag.). Es una palmera que tiene apenas 10 metros de altura. El cogollo se come crudo y cocido. La pulpa de las frutas es muy dulce y casi no es comestible para el hombre, pero es buscada por los animales, especialmente por los cerdos. Las pepas ó cocos de las frutas son de buen sabor v se comen como las almendras. Las frutas — 476 — se usan para la fabricación de un aguardiente que es excelente. Las fibras de las hojas se emplean para la fabricación de sombreros, etc. Cocos Data (Drude et Gr. Symb. n. 1804). N. V. dátil j pindó. E. Corr. Palmera de una altura de 10 á 13 metros. Las frutas son mas ricas que las del Yatay, pero sus pepas no son comestibles. Las hojas proporcionnn un alimento fuerte para los caballos. El cogollo es amargo y no sirve para comer. Cocos australis (Mart. Palm. Orbign. p. 95, t. I, f. 2 et XXX, B). N. V. pindó (en guaraní), las frutas yba-pyta (en guaraní) . BA. E, Corr. Misiones (Parag.). Las frutas de esta palmera tienen un excelente sabor dulce y son muy apreciadas. Se come también el cogollo. Diplotliemium lütorale (Mart. Palm. Bras. p. 110, t. 76, f. 5; Palm. Orbign. t. IX, f. 3). N. V. yatai pony (en guaraní, sign. palmera enana)- en Bolivia motacuc/ri (en el idioma de los chiriguanos). Corr. Misiones (Bolivia). « Las hojas se usan para fabricar escobas. Las frutas son comestibles, de buen sabor, dulces, azucaradas y las pepitas también se comen. Commelyneae. Commelyna cayenensis (Rich. in Act. Soc. hist. nat. París 1, 106). N. V. flor de Santa Lucia. C. Ct. T. S. (sierras), (Am. mer. cal.). Commelyna snlcata (Willd. herb. n. 1054). N. V. flor de Santa Lucia, hayuero mini (en Corr.). E. C. Ct. T. Corr., etc. (Bras. mer., Urug., Parag.). - 477 — En Catamarca, se aplica la planta sobre los ojos en casos de irritación (según Schickendantz). En Corrientes se usan con el mismo fin las gotas mucilaginosas y trans- parentes que se encuentran en la bractea involucral y en el cáliz de la flor. Se dice que el zumo de la planta fresca calma el prurito de los sarpullidos y que es útil contra enfermedades herpéticas locales. El decoctado se emplea interiormente en las leucorreas y esputos de san- gre. (Parodi, Ens. bot. med. x\rg. p. 97). Oramineae. Leersia hexandra (Sw. Prod. 21) var. mexicana (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. I, 195; Gram, I, 179, t. 1). E. T. (zona cal. y templ.). Se cria en lugares húmedos y es un buen forrage para los animales vacunos y caballares. * Oryzn sativa (L. spec. 465). N. V. arroz. Grama originaria de la India Oriental que se cultiva en terrenos que pueden regarse en T. S. .J. O. Corr. Es una planta cultivada desde tiempo inmemorial y no se conoce al estado silvestre. Sus granos son uno de los m^s importantes alimentos que existen, y se comen de diversas maneras muy cono- cidas. En medicina se usan para bebidas mucilaginosas demulcentes y obtundentes; en lavativas son empleados contra la diarrea, etc. Por medio de la fermentación, se fabrica una especie de cerveza, y también aguardiente (el arac) por medio de la destilación. * Zea Mais (L. spec. 1378). N. V. iitais\ en otros paises : zentli ó tlauli de Mé- jico, zara del Perú, giia de Chile, triyo de las Indias, paiiiza de las Indias, mijo turquesco. — 478 — Grama cultivada desde mucho tiempo y originaria de las partes equinocciales de Sud-América y también del Paraguay, según St. Hilaire. La importancia que tienen las semillas de esta grama como alimento fuerte para los hombres y los animales es muy conocida, como igualmente las diversas maneras de prepararlas. Se cultivan diversas variedades en toda la República, sea en las llanuras ó en las sierras (hasta una altura de próximamente 3000 metros sobre el nivel del mar; en el Norte de la R. A). Se saca de las semillas una harina amarillenta que sirve para hacer polentas, tortas, etc., y se emplea para la fabricación de la cerveza, del aguardiente, etc. Las espigas tiernas denominadas choclos se comen tostadas, cocinadas en la comida nacional argentina, el puchero, puestas en vinagre como pepinos, etc. Con los granos maduros se prepara la comida muy conocida en la R. A. y denominada maza-morra. Las partes verdes de la planta componen un buen forrage para los animales va- cunos y caballares. En medicina se usan: la harina de maiz para cataplasmas, el decoctado de las semillas en casos de enfermedades de los ojos, las flores masculinas en los de disuria y otras enfermedades de la uretra y de la vejiga. La infusión de las flores femeninas se toma como té. Las bracteas (chalas) que rodean las inflorescencias femeninas se usan para envolver tabaco y hacer cigar- rillos y las hojas y bracteas sirven para la fabricación de un papel empleado para el mismo ñn. Los indígenas de la R. A. elaboran con la harina del maiz una bebida fermentada semejante á la cerveza y la denominan chicha ; para ello, usan la saliva como fermento mascando una cantidad de granos y agregando la masa mascada á la infusión acuática que quieren poner en fer- mentación. Aunque no sea muy limpia esta preparación, no es mala la bebida producida por su intermedio. — 479 — * Alopecurus pratensis (L. spec. 38). N. V, en Espnña cola de zorra. Grama originaria ^q Europa y de la América setentrio- nal, introducida en la R. A. y espontánea en BA. aunque raras veces; suministra un buen forraje. Se la recomienda para sembrarla con el fin de mejorar el pasto en los bajos y otros terrenos que carecen de humedad. Phleum alpinum (L. spec. 88). Sierras de C. Ct. T. R., etc. (Am. mer. Europa). Esa grama tiene valor como forrajera, pero no se cria en abundancia ni con frecuencia en los prados de las sierras. * Phleum pratense (L. spec. 79). N. V. cola de zorra, grama de Timoteo. Grama común en Europa y en la América setentrional é introducida en la R. A. para la formación de prados artificiales. Suministra igualmente un buen forraje. Monroa mendocina (Phil. An. Un. Chil. t. 36 (1870, p. 210). M. L. C. Ct. R. (alrededores de las Salinas Grandes). Grama que tiene poco valor como forraje para las ovejas, pero que, no obstante, lo suministra en terrenos salados. Phalaris augusta (Nees ab. E., Agr. bras. 391; ic. Trin. icón. t. 78). E. (Am. cal. y templ.). Grama que constituye un buen forraje y que se cria en bajos cenagosos, cañadas secas, etc. * Phalaris canariensis (L. spec. 79). N. V. alpiste, alpistera. Grama originaria de las Islas Canarias ; se cultiva y se halla á veces espontánea, v. gr., en C. E. El uso principal que se hace de las semillas, es para alimentar los canarios y otros pájaros; han sido medici- — 480 — nales en tiempos anteriores y usadas entonces en las enfermedades de la vejiga, v. gr., el cálculo. Paspalum compressum (Nees ab. E. in Mart. Bras, 2, 23). T. (Am. trop. y templ.). Es buen pasto para los animales y se cria especial- mente en los prados de las sierras y al pié de estas. Paspalum distichoplnjllum (Kth. in Humb. et Bonpl. nov, gen. et. spec. am. I, 86). E. (Am. cal. Uruguay). Buen pasto en las playas de rios, etc. Paspalum ciliatum (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. am. I, 87., t. 24); syn. P. blepharop/iorum (K. S. Trin. ic. t. 124). SL. C. S. etc., (Am. mer.). Pasto bueno, pero que nunca se cria en abundancia y (lue es poco común. La semilla es comestible y el decoctado es remedio contra la ictericia. Paspalum notatum (Fluegge, Monogr. Pasp. 106). N. V. gramilla blanca. BA. E. C. T. Ct. R. S., etc. (Am. cáL). Los rizomas son considerados como un remedio eficaz contra la gonorrea; se emplea el decoctado en forma de inyecciones y se toma la infusión teiforme. Paspalum disticlnim (L. Amoen. 5, 391); syn P. vagi- natum (Sw. Fl. Ind. 1, 135). N. V. gramilla dulce, chepina dulce. BA. C, Ct. T., etc. (zona cal. Chile). Sus rizomas se usan en tisanas para las enfermedades del higado; de las vias urinarias, etc. Es un buen forraje. Paspalum pusillum (Vent. ined. Fluegge, Monogr. Pasp. 100). S. (Am. cal. Parag.). — 4S1 — Paspalum caespitosum (Fluegge, Mongr. 161 ; Trin. Icón. 11). S. (Am. mer.). Pasto bueno pero un poco duro. Paspalum dilatatum (Poir. Encycl. 5, 35), sjm. P. dasij- pleuron (Kunze, Trin. Linnaea 1835, p. 294) et P. piálense (Spr. syst, I, 247). BA. M. E. C. T. (Urug.). Paspalum plicatulum (Mich. Flor. 1, 45); syn. F. un- dulatum (Poir Encycl. 5, 29). E. C. T. (Am. mer. y setentr.). Son igualmente gramas que suministran un buen forraje. Paspalum elongatum (Gr. Pl. Lor. n. 803; Symb. n. 1952). N. V. paja colorada. BA. E. SF. C. Ct. T. S. (Parag). Paspalum, quadrifarium (Lam. 111. 178); syn. P. La- í/asca (R. S. syst. 11, p. 317) y P. ferrugineum (Trin. ic. Xri t. 136). N. V. paja colorada. BA. SF. E. (Bras. mer., Urug.). Las dos últimas gramas suministran un excelente ma- terial para techar ranchos y casas y son muy duraderas para este objeto. Los arrieros suelen también fabricar con esta paja las caronas de aparejos para sus muías. Paspalum scoparmm, (Fluegge, Pasp. 65); syn, P. suf- fultum (Mik., Trin. ic, t. 108). E. (Brasil, Parag.). Paspalum virgatum (L. spec 81). E. (Am. cal.). Gramas de forraje para animales caballares y vacunos. Milium lanaíuiíi (Roem. et Schult. syst. 2, 322). P. BA. E. SF. C. Ct. (Am. mer. y centr.). — 482 — Es grama que suministra un buen forraje ; es caracte- rística para las pampas pero no se cria en abundancia, aunque sea común. Digitaria marginata (Lk. Hort. 1, 102) ; syn. Panicum sanquinale (L. spec. 84). N. V. de España garranc/melo. C, Ct. T. S. (casi cosmopolita). Sirve para forraje. Las semillas son comestibles. Digitaria adusta (Gr. Symb. n. 1957). E. (Bms. mer., Urug.). Es pasto duro. Eriochloa montevidensis (Gr. Symb. n. 1958). E. (Urug.), Eriochloa punciata (Harailt. Prod. 5). BA. C. T. (zona cal,). Suministran buen forraje. Orthopogon loliaceus (Spr. sec. det. Gr. Pl. Lor. n. 805 et Symb. n. 1960). T. (Am. mer. y central). Orthopogon setaHus (Spr. sec. det. Gr. Symb. n. 1961). E. (Am. cal. Parag.). Son gramas que se crian en lugares húmedos de los bosques tupidos y sombrosos, y suministran un forraje que sirve especialmente para los animales vacunos. Panicum Crus gallí (L. spec. 83). N. V. en España guizozo de Cuba. E. M. C. T. S., etc. (casi cosmopolita). Es buena grama de forraje. La semilla es comestible. Panicum colonum, (L. spec. 84). Común en toda la K. A. y cultivada en otros paises de Sud- América. Es igualmente buena grama de forraje y su semilla es comestible. — 483 — Panicum ohlongatum (Gr. Pl. Lor. n. 806). M. T. Panicum rivulare (Tr. ic. XXII, t. 264). E. (Bras. mer.)- Panicum grumosum (Nees ab. Es. Agr. bras. 182). N. V. paja mansa ó cariza. BA. E. (Brasil Urug.). Panicum laxum (Sw. Fl. Ind. 157; Ic. Trin. t. 215). E. (Am. cal. y tempL). Panicum enneaneurum (Gr. Pl. Lor. n. 807). T. Todas estas gramas citadas suministran un excelente forraje, especialmente para animales vacunos y caba- llares. Panicum junceum (Nees Agr. bras. 159; Gr. Symb. n. 1969). E. (Bras. mer., Urug., Parag.). Panicum chloroleucum (Gr. Pl. Lor. n. 808). N. V. jahoncillo. Ct. (terrenos salados de altiplanicies). Panicum Jahoncillo (Hiernn. n. sp.), N. V. jaboncillo. Ct. R. (terrenos salados al pié de las sierras). Panicum patagonicum (Hieren. Sertum pat. in Bol. Acad. cieñe, exact. III, p. 377). BA. P. Son cuatro especies muy aliadas, cuyos rizomas se emplean en vez del jabón para limpiar tejidos de lana. Son pastos relativamente duros y de poco valor, pero que sirven para ser sembrados en terrenos arenosos salados, como ser médanos, etc., y sirven con buen éxito para consolidarlos. — 484 — Setaria glauca (P. B. Agrost. 51). N. V. almorejo. Grama común en toda la R. A. (casi cosmopolita). '^'Setaria itálica (P. B. Agrost. 51; Ktti. Gram. 1, 46). N. V. camalote (C); mijo de Italia, panizo común (en España). C. y segm^amente en otras provincias mas; es grama originario de Europa. Setaria setosa (P. B. Agrost. 178); syn. S. macrostachya (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. I, 110). N. V. camalote (C). C. Ct. T. S. (Am. mer.). Setaria globulifera (Gr. Symb. n. 1975). P. BA. E. (Urug.). Las semillas de las tres primeras especies citadas son comestibles. Todas l;is especies mencionadas suministran un buen forraje, especialmente para los animales vacunos. Se recomiendan para mejorar el pasto del campo, echan, dolé semillas. Coicataenia gynerioides (Gr. Symb. n. 1982). • N. V. paja brava. E. Suministra la paja usada para techos de ranchos, etc. Gynothrix rígida (Gr. Pl. Lor. n. 813). N. V. cola de zorro. C. Ct. R Gynothrix chilensis (Desv. in Gay, Hist. Chil. bot. VI p. 251, t. 74). Ct. (terrenos salados). Son gramas útiles para asegurar terrenos movedizos, arenosos y otros; como forraje solo tienen un valor se- cundario. — 485 — Gynothrix latifolia (Schult. Mant. 3. 601). N. V. 'paja. T. (sierra). Suministra á los arrieros la paja para la fabricación de las caronas de aparejos y se usa para techos de ranchos, etc. Tricholaena insularis (Gr. Syml). n. 1983). P. T. y seguramente en otras provincias (Am. mer. y centr.). Es buena grama de forraje, cuya paja se usa también para caronas de íjparejos, etc. Hymenanche montana (Gr. Symb. n. 1971). C. Ct. (sierra). Grama de forraje. Stenotap/irum Americanum (Schrank Hort. Monac. t. 98). E. T. (Asia mer., África, Am. mer.). Grama de mucho valor como forrnje y que es reco- mendada especialmente para asegurar terrenos arenosos, las costas de las islas y l^s orillas do los rios grandes. El rizoma es diurético, refrigerante y se usa en otros paises de la América meridional contra enfermedades sifilíticas, de las vías urinarias y del hígado. Cenchrus tribuloides (L. spec. 1489); syn. C. muricatus (Pbil. An. Un. Chil. 36 (1870), p. 202). N. V. foscta ó flechilla. E. M. SL. C. Ct. R., etc. (Arn.). Las frutas espinosas son nocivas para la cria de ovejas, pues se pegan á la lana y no se dejan sacar con faciliilad. Esta grama es de un valor secundario como forraje cuando tiene frutas, por lo que, con estas, los aniüíales se lastiman fácilmente la lengua y otras partes de la boca. Cenchrus myosuroides (Kth. in Humb. et Bonpl. Nov. Gen. I, 115, t. 35). — 486 — N. V. cadilla, cadillo, cola de zorro. G. Ct. T. en terrenos estériles. Es pasto duro. El dccoctado de los rizomas se usa para inyecciones contra la gonorrea, y se toma también el té como sudorífico y diurético. Sus espigas de flores y frutos espinosos son nocivas pnra la cria de animales lanares por lo que pegándose á la lana no se dejan sacar sin gran dificultad. Lappago aliena íSpreng. N. Entdeck. 3, 15). C. Ct. T. S. etc. (zona cal. y templ.). Grama de forraje que sirve especialmente para ovejas. Piptochaetium mucronatum (Gr. Symb. 1893). S. (sierra alta). Piptochaetium lasianthum (Gr. Symb. n. 1894). E. Piptochaetium palUdum (Phil. sec. Gr. Symb. n. 1895). E. (Chile ?). Piptochaetium uruguense (Gr. Symb. n. 1896). E. Piptochaetium tuberculatum (Desv. in Gay, Hist. Chil. bot. VI p. 272); syn Stipa panicoides (Kth. rev. t. 122 Ns., non Lam.). E. (Bras. mer., Urug., Chile). Piptochaetium chaetophorum (Gr. Symb. n. 1898). C. (sierra). Piptochaetium panicoides (Desv. in Gay, Hist. Chil. bot. VI, p. 270, t. 75, f. 2). C. T. (sierras, (Perú, Chile). Todas las especies de Piptochaetium son gramas que suministran un buen forraje para el ganado vacuno y caba- llar, pero los animales las comen principalmente en in- vierno cuando son secas. Nassella caespitosa (Gr. Pi. Lor. n. 788). — 487 — R. Ct. T. S. (sierras altas). Es pasto duro pero alimenticio. Stlpa chrysop/iylla (Desv. in Gay, Hist. Cliil. bot. VI, p. 278, t. 76, f. 2). M. SJ. R. (Chile) en las alturas de 3000 á 4000 me- tros sobre el nivel del mar. Es grama de forraje relativamente buena por la gran altitud en que ella se cria y es muy buscada por los animales. Stipa hyaliaa (Nees. ab. Es. in Mart. Bras. II. 378). C. E. (Urug.), (pampas). Grama característica de ciertas pampas. Stlpa Ncesiana (Tr. Rupr. Stipac. p. 27). E. Ct. T. (Urug.), (prados). Stipa Lorentziana (Gr. Symb. n. 1903). C. (llanos). Stipa leptostachya (Gr. Symb. n. 1904). S. (sierra alta). Stipa tenuissima (Tr. Act. Petr. 1836, p. 36). M. SF. C. Ct. (pampas). Stipa Ichu (Kth. Gram, I, 60). N. V. coirón, paja, pasto coirón. C. T. (sierra) (Perú, Bolivia). Stipa yynerioides (Phil. An. Un. Ciiil. 36 (1870), p. 203). M. R. (sierra). Stipa papposa (Nees ab. Es. in Mart. Bras. II, 377). N. v. eibe, paja. SF. C. etc. (Urug., Chile), (pampas). Stipa geniculata (Phil. An. Un. Chil. 36 (1870), p. 204). M. Stipa tennis (Phil. An. Un. Chil. 36 (1870), p. 204). M. Bol. Acad. IV. 32 — 488 — Stipa ^eaei (Nees, ap. Steud. syn. Pl. glum. I, p. 126, n. 33); syn. Stipa bella (Phil. An. Un. Chil. 36 (18/0), p. 203) ex. descr.). P. M. Stipa humilís (Cav. icón, et descr. V. t. 466 f. 1). P. Todas las especies del género Stipa mencionadas son pastos relativamente duros; algunos son muy caracterís- ticos de los lugares donde se crian, encontrándose gene- ralmente en gran número de individuos formando á veces la vegetación casi sin mezcla alguna de otras plantas. No carecen de valor para la cria de ganado, especial- mente del vacuno y del caballar. Los animales las buscan en el verano cuando florecen y solo comen entonces, generalmente, las inflorescencias que parecen tener un sabor mas dulce que los céspedes; en invierno, los ani- males comen también los céspedes secos, existiendo apenas en ese tiempo unas que otras gramas mas tiernas. Algunas de las especies que se crian en céspedes muy tupidos, V. gr., St. {/ynerloldes, St. Ic/iu, St. papposa, . suministran un excelente material para la fabricación de las caronas de aparejos, como también para techar ran- chos y casas, llenar colchones, etc. Aristida stricta (Mich. Flor. I, 41). N. V. saetilla. C. Ct. R. T. (Am. mer. y set.). Aristida setifolia (Kth. Agrost. syn. p. 189, sec. det. Gr. Symb. n. IHIO) syn. A. mendocinn (Phil. An. Un. Chil. 36 (1870). p. 205) ex spec. auth. N. V. saetilla. M. C. Ct. T. S. (Brasil). Aristida interrupta (Cav. Icón, et descr. V, p. 45. t. 471, f. 2). C. R. (Am. mer., Méjico). — 489 — Aristidaji paria (Tr. Act. Petr. 1836 p. 48). E. C. (Parag., Méjico ?). ArisHcla palle ns (Cav. Icón, et descr. V. p. 43, t. 468, f. 2). E. SF. C. (Chile, ümg., Brasil), (pampas). Aristida coinplariata (Tr. in x\ct. Petrop. 1830, I, 85). E. (Bras. mer.). Son gramas de forraje duras cuyo valor es secundario. Muehlenbergia Clomena (Tr. Uniñ. 194). C. R. T. S. etc. (sierra alta) (Perú, Méjico). Es pasto corto pero bueno para ovejas. Muehlenbergia nardí folia (Gr. Symb. n. 1877). BA. C. Es pasto c(>rto y amargo que se cria en terrenos sala- dos de las pampas, etc. Muehlenbergia tenella (Tr. Uniñ. 192). T. (Méjico, Am. cal,). Muehlenbergia diffusa (Willd. spec. 1320). T. (Am. cal.). Son dos gramas tiernas que suministran un buen forraje. Muehlenbergia phragmitoides (Gr. Pl. Lor. n. 782). T. Pasto relativamente duro pero alimenticio. Lycurus alopecuroides (Gr. Pl. Lor. n. 783). Ct. R. (terrenos salados de las sierras). Grama de forraje buscada especialmente por las ovejas. Sporobolus sarmentosiLS (Gr. Symb. n. 18S7); syn. Agrostis distichophylla (Phil. pl. mend. ex spec. auth. non R. S. syst. II, 354). P. M. BA. C. R. (Bolivia). Grama algo dura y amarga, pero que puede recomen- — 490 — darse para consolidar terrenos salados movedizos en las cercanías de las lagunas, rios salados, etc. Sporobuliís indicus (K. Br, Prod. I, 170). Es común en toda la R. A. Buen forraje pero que necesita terrenos algo húmedos; se cría en los prados de las sierras y de los llanos. Sporobolus subinclusus (Phíl. An. Un. Chil. 36 (1870), p. 207). M. Grama muy aliada á la anterior, constituye igualmente un buen forraje. Sporobolus fastigiaius (Prsl. in Reí. Haenk. I, 241). J. (sierra alta), (Perú). Grama pequeña en territorios salados de las altiplani- cies de la "puna"; es forraje para ovejas. Giiinagrostis j>olygaiiia (Gr. Pl. Lor. n. 786). T. (sierra). Grama que suministia un buen forraje para los anima- les vacunos y caballares; pero es algo dura, y por esta razón, es principalmente consumida en tiempo de invierno, cuando no existen pastos mas tiernos. Diachyí'ium arundinaceurn (Gr. Pl. Lor. n. 787). P. BA. C. R. Ct Es grama muy dura que no sirve para forraje, aunque los animales llegan á comerla en años de mucha escasez de otro alimento ; se cria en terrenos estériles y se presta bien para ser sembrada en terrenos movedizos y secos, como son médanos arenosos; barrancas, etc., á fin de consohdarlos. Agrostis bromidioides (Gr. Symb. n. 1866). S. (sierra alta). Agrostis nardifolia (Gr. Pl. Lor. n. 77;3); syn. A. canescens (Pl. Lor. n. 774. ex spec. authent!). — 491 — Ct. K. (sierra alta). Es grama característica para, la altura de 3500 á 4500 metros sobre el nivel del mar y es el único pasto que se encuentra en ciertos parajes de la Cordillera. Agrostis rosea (Gr. Pl. Lor. n. 775). C. Ct. R. (sierra). Es grama característica en las altitudes de 1500 á 2500 metros sobre el nivel del mar. Agrostis Antoniana (Gr. Symb. n. 1870). S. (sierra alta). Grama característica de las alturas de 3000 á 4000 metros sobre el nivel del mar. Agrostis fulva (Gr. Symb. n. 1870). S. (sierra alta). Se halla con la anterior en las mismos altitudes. Agrostis eminens (Gr. Pl. Lor n. 776). C. Ct. R. (sierras). Pasto que se cría á una altura de 1500 á 2500 metros sobre el nivel del mar. Agrostis exasperata (Kth. Trin. Act. Petr. 6. III, 352). BA. C. R. Ct. (Chile). Grama que se cria en terrenos húmedos, en los bordes de acequias, etc., de los llanos y de las sierras bajas. Agrostis laxi flora (Richards, x\pp. 3) var. nristata, (Gr. Pl. Lor. 778). C. (Am. mer. y setentr.) (sierra baja). Agrostis nona (Kth. Enum. L p. 226) var. aristata (Gr. Symb. n. 1875). S. (sierra alta), (Chile). Grama característica para alturas de 3500 á 4500 me- tros sobre el nivel del mar. Agrostis patagónica (Ph. Linnaea 39 p. 89). P. — 492 — Todas las especies de Af/msfÁs citadas suministran un buen forraje, son gramas de mucha importancia, espe- cialmente las especies que se crian en las sierras por la razón que se hallan generalmente en gran número de individuos. Polypogon interrUptus (Kth. in Humb. et Bonpl. Nov. gen. et spec. am. I, 134). M. SJ. R. Ct. S. (Am. mer.). * Polypogon monspeliensís (Desf. Fl. Atl. I, 66). Grama originaria de la Europa meridional y de África; espontánea en muchos parajes de la R. A., v. gr. P. BA. M. SJ. R. Polypogon elongatus (Kth. in Humb. et. Bonpl. Nov. gen. I. 134). BA. M C. Ct. T. (Am. mer.). Las tres especies citadas suministran un forraje de buena calidad, Epicanipes coerulea (Gr. Pl. Lor. n. 784). C. T. (sierra). Es pasto duro, pero alimenticio. * Arundo Donax (L. spec. 120). N. V. caña común. Originaria del Sud de Europa, Asia y Norte de África; se cultiva mucho en los puntos mas cálidos de la R. A., para cercos vivos de quintas, viñas, etc. La raíz (rad. Donacis s. Cannae Cargannae) contiene azúcar y almidón; tiene virtudes sudoríficas y diuréticas; ha sido usada como antilácteo y recomendada contra la hidropesía. Las cañas se emplean para construir las paredes y los techos de ranchos, etc. Arundo occidcntaUs (Sieb. Herb. Mart. in Schult. Mant. 2. 289 sec. det. Gr. Pl. Lor. n. 761 et Symb. n. 1820). N. V. caña. BA. C. R. (Martinica, Am. mer.). — 493 — Las cañas tienen los mismos usos que las de la grama anterior. Gynerium argentcum (Nees ab Es. in Mart. Bras. % 462)- N. V. coítadera. corriza, poja brava. En toda la R. A. (Urug., Bras mer., Chile). En Europa se cailtiva esta grama por su hermosura en los jardines y píirques; las cañas alcanzan una altura «le 6 metros y las hojas tienen hasta 3 metros de largo. El cocimiento de la raíz es diurético y se toma en casos do enfermedades del hígado, de los ríñones y de las vías urinarias; se ha recomendado también para fortificar Jos bulbos del cabello. Las hojas constituyen un material muy valioso para la fabricación del papel, Pappop/iorum alopecuroideurn (Vahj, Symb. 3.10. t. 51; Ic. Kth. rev. t. 132); syn. P. vaginaturn (Phil. An. Un. Chil. 36 (1.^70), p. 206 ex spec. auth!). M. C. R. Ct. S. (terrenos salados). Pappophorum saccharoides (Gr. Symb. n. 1920). C. R. (Parag.). Pastos un poco duros pero de valor, por ser muy adecuados: el primero para producir vegetación en ter- renos salados y arenosos, y el segundo en lugares pedre- gosos. ScleropOiion brevifnlius (Phil. Ao. Un. Chil. 36 (1870), p. 206). M. Ignoro si suministra ó no forraje. Microdiloa setacea (R. Br. Prod. L 20^). C. Ct. T. S. (zona cal. y templ). La raíz es aromática y se usa en otros países como estomacal, diurética y sudorífica; se emplea también como especie. Es grama pequeña que suministra buen forraje para las ovejas. — 494 — Cynodon Dactylon (Pers. Syn. I, 85). N. V. grama de España. BA. C. T. S, etc. (zonas cal. y templ.). Los rizomas son diuréticos, refrigerantes y usados en medicina (rizoma graminis italici s. gramen officinarum s. gramen Dactylon) para sustituir los rizomas de TrUicum repens (L.). Las semillas son comestibles. Es grama de forraje de un valor mediocre, pero que se recomienda pnra sembrar en terrenos arenosos, médanos, etc., con el fin de hacer- les menos movedizos. Dactyloctenium aegyptiacum (Willd. Enum. 1029). T. (zona cal. y templ.). Las semillas son comestibles, pero tienen propiedades diuréticas. La infusión teiforme del rizoma es diurética y sudorífica y se usa interiormente en casos de fiebres intermitentes, amenorrea, etc.; su médula se emplea exteriormente como estíptico y vulnerario, y la yerba para sanar úlceras. Boutelona curti péndula (As. Gr. sec. det. Gr. Pl. Lor. n. 793 et Symb. n. 1923). C. Ct. S. Boutelona ciliata (Gr. Symb. n. 1924). N. V. saetilla blanca. Ct. S. etc. Boutelona lophostachya (Gr. Symb. n. 1925). R. Ct, T. S. Boutelona nana (Gr. Symb. n. 1926). C. Boutelona multiseta (Gr. Symb. n. 1927); syn. Eutriana multíseta (Ns. ab E., Kth. rev. t. 138). E. SF. C. (Urug.). Boutelona teñáis (Gr. Pl. Lor. n. 794). C. T. S. J. (Bolivia, Perú, Méjico, islas Filipinas). — 495 — Boutelona liumilis (Hieron.); syn. Chondrosium humlle (P. B. Agiost.) et B. tennis var : liumile {Qr. Symb. sLib. n. 1928). C. T. J. (siena alta), (Nov. Gr;mada, Ecuador, Perú, etc.). Las especies citadas de Boutelona suministran" un buen forraje especialmente para las ovejas. Chloris petraea (Thunb. Prod. 20). P. BA. E. C. T. S. (Am. trop. et subtr.). Chloris distichophylla (Lagasca, Elench. 4). C. (Chile, Bras. mer. Chloris ciliata (Swartz, Fl. Ind. occ. I. 197). C. T. (Parag. Brasil). Chloris barhata (Swartz, Fl. Ind. occ. I, 200). C. Ct. T. S. (Am. mer.). Chloris Beyrichiana (Kth. Gram. I, 89, 289, t. 56). BA. T. (Brasil). Chloris polydactila (Swartz, Prod. 26). T. (Am. cal. y tempL). Chloris radiata (S\\artz, Fl. Ind. occ. I, 201). ; syn. Cht. glaucesoens (Steud. in Lechl. pl. peruv. 2478). S. (Am. mer.). Chloris mendocina (Phil. An. ün. Ghil. 36 (1870) p. 208). P. M. C. S. J. R. (terrenos salado.s). El nombre vulgar de todas las citadas especies de Chloris es: pasto borla. Son plantas que proporcionan un forraje de muy buena calidad. Eriaehne rigida (Phil. An. Un. Chil. 36 (1870) p. 208). M. Parece ser tieso y duro su forraje. Leptochloa virgata (P. B. Agrost. 71). E. T. (Am. mer. Antillas). Es grama de buen forraje. — 496 — Leptochloa fascicularis (As. Gr.). T. (Am. cal. Parag.)- Es pasto mas duro que el de la especie anterior. Eleusine indica (Gaertn. Fruct. 1, H). T. y seguramente en otras provincias mas (zona cal. y templ.). Eleusine tristachya (Kth. Gram. L 92). E. C. SF. T. (ürug.). El rizoma sirve de lemedio contra la diarrey. Las se- millas son comestibles. Son gramas que dan un forraje de buena calidad. Deschampsia Kingü (Deí^v. in Gay Hist. Ghil. bot. VI, p. 335); syn. Aira Kingü (Hook. fil. Fl. antarct. L 376). Tierra del Fuego, P. Suministra un buen forraje para los animales caballares y vacunos. Deschampsia antárctica (Desv. in Gay, Hist. Cbil. bot. VI, p. 338); syn. Aira antárctica (Hook. fil. Fl. antarct. I, p. 377),-y ^ Deschampsia atropurpúrea (Sebéele Flora 1^44, I, 56); syn. Aira inagellamca (Hook. fil. Fl. antarct. I. p. 376). Estrecho de Magallanes. Son buenos pastos para oveja •^. Airopsis millcgrana (Gr. Pl. Lor. n. 772; Symb. n. 1864). BA. SF. E. C. T. (terrenos húmedo.s), (Parag.). Airopsis jabata (Gr. Symb. n. 1865). T. S. J. O. (Bolivia). Suministran un buen forraje para los animales vacunos y caballares. * Averia barhata (Brotero, Lus. 108); syn. A. hirsuta (Roth. cat. 3, 19). N. V. cebad illa. Originaria de Europa y del Asia, introducida en las sementeras, v. gr., E. T. Ct. — 497 — Avena leptostachys (Hook. fil. Fl. antarct. T, 378). P. (estrecho de Magallanes). Son gramas que proporcionan un forraje de buena ca- lidad. Dantonia picta (Nees et Meyen, Nov. Act. XIX suppl. 11,157). C. (sierra Achala), (Perú. Chile). Pasto corto y bueno para las ovejas. Tr i lidia Kerf/uelensis (Hook. f. Fl. ant. I p. 389). Tierra del Fuego, (Kerguelen). Buen pasto para las ovejas. Tricuspis la ti folia (Gr. Pl. Lor. n. 799). es. (Parag). Suministra paja y un pasto duro. Poa annua (L. spec. 99). N. V. espif¡i/ela, i/erbn de punta (en España). Dá un excelente forraje y es común en toda la R. A. P(M holciformis (Prsl. in Reí. Haenk. I. 272). S. (sierra), (Chile). Poa scaberula (Hook. f. Fl. antarct. I, p. 378). C. (sierra) (Territ. magallánico, Chile). Poa pallens (Poir. Ene. V, 91. ex Cxr. Symb. n. 1842). BA. E. (Chile). Poa bonariensis (Kth. Rev. Gram. I, 115; En. I, 353; Gr. Symb. n. 1843). P. BA. C. (.sierra), (Chile). Poa lanígera (Nees, Agr. Bras. 491). BA. C. (Urug., Brasil, Chile). Poa lanicginosa (Poir. Ene. V, 91; Gr. Symb. 1844). P. BA. E. (Bras. mer.. Urug., Chile). Poa chilensis (Trin. Act. Petr. 1838 supl. 62; Linnaea X, 306). S. (sierra alta) (Chile). — 498 — Poo Berr/ii (Hieron. in Bol. Ac. cieñe. III, p. 374). P. Todas estas gramas suministran excelentes forrajes de calidad blanda y alimenticia. Existen además en la R. A. algunas otras especies del género Poa que también son todas útiles por la misma razón, pero nos faltan aún las determinaciones exactas de ellas. Eragrostis pooeoides (P. B. Agr. 71, t. XIV, f. 11). M. BA. C. E. J. etc. (zona cal. y templ.). Eragrostis pilusa (P. B. Agr. 71). N. V. pasto pelillo. BA. 8F. C. Ct. S. etc. (zona cal. y templ.). E'-agrostis lugens (Nees ab Es. in Mart. Bras. 2, 505). BA. C. Ct. R. T. (zoni cal. y templ.). Eraii rostís megastachga (Lk. Hort I., 185)-, syn. E. ntajor (Host. Gram. 4. t. 24). En toda la R. A. Eragrostis mexicana (Lk. Hort. 1, 190). T. S. (zona cal. y templ. mer.). Eragrostis verticillata (Roem. et Scliult., Syst. 2, 575). C. Ct. T. S. etc. (zona cal. y templ. mer.). Eragrostis hahievsis (Schrad. in Schult. Mnnt. 2, 318). E. C. S. (zona cal y templ.). Eragrosús Neesii (Trin. in Act. Petrop. VI, 1, 405). E. (Urug., Parag., Bras. mer.). Todas las especies citad;is de Eragrostis son gramas con forraje de excelente calidad. Ipnum mendocinum (Phii. An. ün. Chil. t. 36 1870) p. 211). BA. M. R. Ct. Grama de buen forraje. Atropis carinata (Gr. Symb. n. lr^53). BA. J. y seguramente en otras provincias (Parag.). — 499 — Pasto de calidad mediocre eu terrenos salados. Atropis magellaiiica (Desv. in Gay, Hist. Chil. bot. VI, p. 394). syn. Catabrosa mayellanica (Hook. fil. Fl. antarct. I, 387). Es grama cuyo forraje es de buena calidad. Distichiis prostrata (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. am. I, 157; Desv. in Gay, Hist. Chil. bot. 11, 398). P. BA. J. (Méjico, Perú, Chile). Distichiis thalassica (Kth. in Humb. et. Bonpl. nov. gen. et spec. am. I, 157; Desv. in Gay Hist. Chil. bot. VI, p. 395). SF. C. Distichlts ntendocina {hhú. An. Un. Chil. 36 (187U), p. 2U9). P. BA. M. U. Las tres especies citadas son pastos amargos y se crian en terrenos salados. Los animales solo las comen cuc'n" do les falta otro alimento. * fíriza hiinor (L. spec. 102). Esta grama es originaria de Europa, Asia, etc. ; se halla espontánea en E. Suministra un buen forrage. Callotheca elef/ans (P. B. Agrost. 157, t. 17. f. 7). E. (Bras. mer. Urug.); en prados. Callotheca t rilaba (Kth. En. I. 574; Ic. Trin. icón. t. 294). E. C. T. (Urug.); en prados de las sierras y de los llanos. Callot/ieca stricta (Hook.) var. Mandoniana (Gr. Symb. n. 1837). T. (Bolivia, Chile); en prados de las sierras. Las tres especie» mencionadas y otras mas que aún no he determinado con nombre científico, suministran un forraje de calidad excelente. — 500 — Mélica macra (Nees ab. Es. in Mart. Bras. II. 486). N. V. paja bíava. E. C. (Urug.); en pampas, bosques, etc. Mélica aurantiaca (Desrouss. in Lam. Encycl. 4, 70; Cav. icón, et descr. V, 46, t. 472, f. 1. BA. E. (ürug.); en pampas, prados, etc. Mclica papilioriacea (L. mant. 31). N. V. poja brava. E, C. (Bras., Urug.); en pampas^ bosques, etc., de los llanos. Mélica rígida (Cav. Icón, et descr. V, 47, t. 472, f. 1). P. BA. (Urug.); en pampas. Mélica violácea (Cav. Icón, et descr. V, 47, t. 472, f. 2) C, (sierra Achala), (Chile); en pampas de las sierras Mélica laxi flora (Cav. Icón, et descr. V.. 48, t. 473, f. 2) C. (sierra Achala), (Chile); en pampas de las sierras Mélica sarinenlosa (Nees ab Es. in Mart. Bras. II, 485) E. (Bras. Urug.); grama trepadora que se cria hasta una altura de 4 metros en bosques ribereños. 8on gramas que suministran un forraje duro y tieso, pero son alimenticias y buscadas especialmente por las muías y los burros. Koeleria micraiithera (Gr. Symb. n. 1859). Ct. (Chile); en prados de las sierras. Koeleria caudulata (Gr. Symb. n. 1860). S. Grama característica para alturas de 3000 á 4000 metros. Koeleria Bergii (Hieren. Sert. Patag. in Bol. Ac. v. DI, p. 376). P. Estas y otras especies de Koeleria existentes en la R. A., pero aún no determinadas, son excelentes gramas de forraje. — 501 — Festuca eriolepis (Desv. in Gay, Hist. Chil. bot. VI, p. 428). P. Chile). Festuca rnu;-alis (Ktli. iu Humb. et. Bonpl. nov. gen. 7, t. 691); syn. /'. australis (Nees ex Gr. Symb. n. 1827). P. E. C. (Chile, Perú). ^ Festuca nardifolia (Gr. Symb. n. 1828). S.; en la sierra de 3000 á 4000 metros de altitud. Festuca nKKjcllaiiica (Lam. III. I, 189 ex decr. Desv. in Gay Hist. Chil. bot. VI. p. 432); syn. F. erecta var. aristulüla (Gr. Pl. Lor. n. 765). Ct. K. S. (Chile). Grama característica para alturas de 3000 á 4000 metros. Festuca dissitiftura (Steudel in Lechl. pl. peruv. 1829). C. Pt. Ct. T. S. etc. (Chile). Grama común que es característica de sierras bajas. Festuca sel i folla (Steud. sec. Gr. Pl. Lor. n. 766 et Symb. n. 1831). Ct. T. ; en las sierras. Festuca circinata (Gr. Symb. n. 1832). C; en las sierras. Festuca anyustata (Gr. Symb. n. 1833). S. ; en las sierras altas de 3000 á 4000 metros de altura sobre el nivel del mar. Festuca, fuegíana (Hook. rtl Fl. antarct. I. 383). Tierra del Fuego. Festuca scoparia (Hook. f. 1. c). Tierra del Fuego; estrecho de Magallanes. Todas las especies mencionadas de Festuca, y aún otras mas existientes en la K. A., son buenos pastos y contribuyen mucho en ciertos puntos, especialmente de las sierras, á hacer engordar los animales vacunos y caballares. — 502 — Bromus unioloides (Kth. et Humb. Agi'ost. syn. p. 415; Enum. II. supl. I, p. 341). N. V. cebadilla. Grama común en toda la R. A. (Am. mer. y setent.). Es uno de los mejores pastos, pero necesita terrenos húmedos ó años lluviosos para poder criarse bien. Hasta ahora solo se han hecho pruebas en pequeña escala para cultivar esta planta en lugar del alfalfa. Bromus cathart ¿cus (Vahl. Symb. II, 22); syn. Br. Tacna (Steud. in Lechl. pl. peruv. 1541 et 1570). N. V. en Chile i/uilno. T. (Chile, Perú). En Chile la raíz es considerada como purgante. Bromus auleticus (Tr. ap. Nees ab Es. in Mart. Bras. II, 468). E. C. SF., etc. (Urug.). Pasto duro, pero alimenticio. Bromus mollis (L. Agrost. syn. p. 413). BA. (Am. mer. Europa). Pasto blando, pero que causa vahídos á los nnimales cuando estos lo comen en abundancia. Bromus Haenkeanus (Kth. Enum. I, 146). Ct. (Chile, Perú). Grama de buen forraje que se cria en las sierras. Halochloa acerosa (Gr. Symb. n. 1819). C. Ct. (territorio de las salinas). Es grama dura pero útil para consohdar terrenos sala- dos y movedizos. Chnsquoa Lorentziana (Gr. Pl. Lor. n. 760). N. V. caña brava. T.; en las sierras bajas. Grama alta, de 3 á 4 metros, con cañas largas y rami- ficadas como arbusto. — 503 — Las cañas se ocupan rancho para zarzos de techos de paja, de paredes de carretas, etc. Esta Bamlmsacea cubre principahnente el fondo y las laderas escarpadas de quebradas angostas de hi sierra, y hace á la distancia el efecto de cabellos verdes, contribuyendo así á embe- llecer los sitios de una manera extraordinaria. Es por este motivo que es recomendada para planta de adorno en parajes adecuados, etc. Chusquea Cumingii (Nees ab Es. Linn. IX, 487; Nees et Rupr. Mon, Barab. 32). N. V. coligue. M. (cordillera), (Chile). Las cañas y la paja se usan para techos. Chusquea lieterophijUa (Nees ab Es. Linnaea IX, 488). E. (Brasil, Urug.). Suministra paja para techos de ranchos, etc. C/atsquea Colen (Desv. in Gay, Hist. Chil. bot. VI, 450, t. 83, f. 2). N. V. colea, coligue. P. Los indios emplean para lanzas las cañas rectas y largas . * Lolium perenne (L. spec. 122). N. V. ballico en España. Grama originaria de Europa, Asia y Norte- A.mérica, cultivada en parques, plazas, etc., de las ciudades de la R. A. y á veces espontánea. En la antigüedad, se ha usado esta grama contra la diarrea y las menstruaciones demasiado fuertes. Es exce- lente pasto para los animales. '^Lolium multíflorum (Poií. Lamk. fl. gall. III. 90); syn. L. italicum (Al. Br. Flora XVII, 259). N. V. en España ballico. Es grama originaria de Europa ; suministra un exce- Bol. Acad. IV. 33 — 504 — lente forraje y se cultiva como la anterior y para el mismo aso en la R. A. * Loliuin teiiiulentuní (L. spec. 122). N. V. baliteo (R. A.); en España zizaña común, ra- billo, borrachuela, joyo y cominillo. Maleza en los sembrados de trigo, donde se halla á veces en gran cantidad; no deja entonces de ser nociva si son cosechados sus gnmos juntos con los del trigo y que se mezcla la harina de unos y de otros. Cuando se come pan hecho con esta harina se producen vértigos, desvanecimientos y una especie de embriaguez. Las se- millas (semen LAií) contienen una substancia narcótico- venenosa que se llama loliina. * Triticum vulyare (Vill. Delph. 2, 153) en dos formas principales que son: a. aeslívuní (Xth. En. I. p. 438), y b. kybernum (Kth. En. 1, p. 438). N. V. trigo común. Grama originaria del Asia, cultivada desde miles de años; se cultiva ahora en muchos puntos de la R. A., y especialmente en el Litoral, asi que los granos de trigo desempeñan ya un papel importante en la exportación. La harina de las semillas es la mas apropiada para la fabricación del pan. El almidón puro que se extrae de las semillas es usado de varios modos técnicos, v. gr., para engrudo, para atiesar la ropa blanca, etc.; en medi- cina se emplea como remedio obtundente, principalmente en lavativas contra la diarrea; mondado, se usa para comer ; su decoctado contra diarreas y disenterias. La harina se emplea para cataplasmas, polvorear pildoras y para la fabricación de obleps; el salvado ó la malta, para baños y cataplasmas. Además, con el tiigo se fa- brica aguardiente y la cerveza clara, inglesa (ale) — En Europa se cultivan las siguientes seis especies principales, con cuya cultura quizas se han hecho ya — 505 — ensaj'-QS en la R. A., aunque no tengo conocimiento de ellos. * Tñticuní Spelta (L. spec. 127); syn. T. Zea (Host. Gram. III, t. 29). N. V. espelta, escanda ó escaña. Se cultiva especialmente en las partes occidentales de Alemania, en Francia, etc. Los granos no maduros se usan para hacer ciertas sopas alimenticias. La harina es mas fina que la del trigo común. El pan fabricado con ella tiene muy buen sabor; es también usada para la fabricación de fideos, confites, etc. * Triticum amyleum (Ser. Mel. hot. I, 124); syn. T. tricoccum (Schneb. Bot. Zeit. 1820, 458); T. atratum (Host. Gram. 4. t. 8). Se cultiva especialmente en España y se usa para la fabricación de sémola. * Triticum turgídum (L. spec. 126). Es cultivada en España, donde tiene varios nombres vulgares cuyo principal es trigo moruno ó macho. * Triticum monococcum (L. spec. 127). Originario de la Tauria y cultivado en diversas regio- nes de Europa. La harina se usa especialmente para la fabricación de sémola. * Triticum polonicum (L. spec. 127); syn. T. Cevollos (Lagasc. Elench. 6). N. V. trigo polaco, trigo de Jerusalem., etc. Soporta un clima relativamente cálido y por esta razón se recomienda su cultura para ciertas regiones delaR. A. * Triticum durum (Desf. Atl. 1,114). N. V. trigo siliciano ó francés. Se cultiva en diversas regiones de la Europa meridio- nal. Su harina sirve para la fabricación del macaroni. — 506 — * TrUicura repens (L. Agrost. syn. p. 44Ü). N. V. en España: grama del Sorte, gramilla blanca. Es grama originaria de Europa, de Asia y de la Amé- rica setentrional (?) ; en la K. A. es introducida y relati- vamente se encuentra raras veces espontánea, v. gr., C. Los estolones ó rizomas son ofícmolQ^ {^aiHx graminis albí), tienen propiedades emolientes y diuréticas ; contie- nen almidón y azúcar y pueden usarse para la fabrica- ción de la cerveza y del alcohol, Trltícum pubifloriim (Steud. Syn. Glum. I, p. 429). C. (Urug., Territor. magallánico). Es una especie aliada á Ja anterior y se podria segu- ramente emplear sus rizomas á los mismos fines. * Sécale cércale (L. spec. 124), N. v. centeno. Grama originaria del Cáucaso, etc., y cultivada desde mucho tiempo en los países frios y montuosos. Se han hecho ensayos de cultura en BA. y P. La harina que contienen las semillas de centeno es muy alimenticia pero lo es menos que la de las especies cultivadas de Triticum, y no es de tan fácil digestión que esta. En medicina, se emplea como alimento en en- fermedades tísicas y exteriormente para cataplasmas contra úlceras, almorranas, etc. La levadura es usada como rubefa cíente. El salvado se emplea para baños y cataplasmas. La infusión de los brotes nuevos y de las inflorescencias (flores Secalis) se usa contra enfermedades del pulmón, etc. En Europa se emplean los granos de centeno para fabricar aguardiente, y una vez tostadas para sustituir el café. Existen dos variedades del S. cércale, que han sido también propuestas como especies; son: * Sécale vUlosum (Rísso). que se cultiva en Italia y Sud de Francia, y el — 507 — * Sécale creticum (L. spec. 125). que se cultiva en Grecia. Como aquellas soportan un clima relativamente cálido; las recomendamos para ensayar su cultura en la R. A. * Hordeum vulgare (L, spec. 125). N. V. cebada común. Grama forrajera cultivada, desde mucho tiempo ; dá muy buenos resultados en algunas regiones de la R. A., V. gr., BA. SF. C. La harina de las semillas se emplea para hacer pan, y la malta se usa para la fabricación de cerveza y como sustituto del café. Oficinal es la cebada perla ó mon- dada {Hordeum mundatum excorticatum s. peiiatiim) cuyo decoctado se dá á tomar á los enfermos de fiebres y se receta como atemperante, emoliente y nutritiva. La malta se pone en baños corroborantes y se ha usado contra el escorbuto en los viajes marítimos. El almidón {fariña Hordei. praeparata, s. Hordeum praeparatu))i) se usa en casos de consunción. * Hordeum hexastíchon (L. spec. 125). N. V. cebada ramosa. * Hordeum distichon (L. spec. 125). N. V. cebada ladilla, cebada de dos carreras, hordiate ú ordiate. * Hordeum Zeocriton (L. spec. 125). N. V. cebada de abanico. Las tres últimas especies constituyen también un buen forraje y se cultivan en Europa para los mismos fines que la cebada común. Con la cultura de la cebada ra- mosa se han hecho ya ensayos en la R. A., v. gr., SF.; ignoro si con las otras dos especies se han hecho igual- mente. Hordeum maritirnum (With. bot. Arr. 172). P. BA. — 508 — Suministra un forraje de calidad secundaria en terrenos salados y arenosos. Hordeum jnbatum (L. spec. 126) syn. '? ¡1. comosuin (Presl. Reí. Haenk. 1, 327). P. BA. (Am. setent. V). Hordeum murinum (L. spec. 126). N. V. cebadilla del campo. P. BA. (Europa, Asia occident., Am. mer.). En tiempos pasados ha sido oficinal {Herba Hordei mu- riní) y empleada para la diarrea y la disenteria. Es grama de forrage, como lo es también la especie anterior. Hordeum itulophiluní (Gr. Pl. Lor. n. 758). Ct. R. ; en terrenos salados de las sierras. Hordeum coinpressum (Gr. Pl. Lor. n. 759). c. Hordeum clülense (Brogn. in Duperr. It. Bot. p,. 54). E. M. C. (Chile). Hordeum pusüluní (Nutt. gen. 1, 87). P. BA. E. SF. C. (Ara. setentr.) Son gramas de forraje cuya importancia es secundaria, pero cuya siembra en terrenos arenosos y salados, v. gr., médanos de las orillas del mar y las cercanías de las Salinas Grandes, es recomendada. El //. haloplúlum es especialmente para territorios de la misma clase en las altiplanicies (punas) de las Cordilleras. Hordeum andícola (Gr. Symb. n. 1816). T. S. (sierras). Es un excelente pasto que se cria en los prados de las sierras. * Saccharum officíiwruin (L. spec. 79) y la variedad S. violaceum. (Tussac. Antill. I, 160 t. 25). N. V. caña dulce, caña de azúcar. Es originaria de la India Oriental ; se cultiva mucho — 509 — en todas las provincias y territorios del Norte de la R. A. que son: T. Sgo. S. J. O. (Jh. y Gorr., y representa una de las principales riquezas del pais. El zumo de la caña se emplea, como es sabido, para la fabricación del azúcar. Se chupa el zumo de las cañas crudas peladas; fermentado, dá una bebida agradable, el f/uarapo, que es muy estimada especialmente por los indios (Chiriguanos, Matacos,) etc. que vienen á trabajar en los estableciiij lentos. Por medio de la destilación de este zumo se hace aguardiente (caña). En medicina, para bebidas refres- cantes y calmantes, se usa el azúcar refinado {saccharnuí álbum) como atemperante, denmlcente y béchico, contra catarros, ronquera, etc; en casos de envenenamientos, se dá con sales metalíferas; exteriormente se emplea como cáustico suave para la catarata, aftas, carnes fungosas y rajas ó grietas en los pezones de los pechos. Con la melaza ó melote {faex sacchari s. sijrv ¡ms ewpyreu'maticus) y su espuma, se fabrica el ron en la Jamaica. Iniperata oaudata ('l'r. sec. det. Gr. Symb. n. 1997). S. J. (Am. cal.). Imperata cnndensata (Steud. ad calcem Lechl. Berb. am. citata). J. (Chile). Suministran un buen forrage y se crian en los prados subtropicales. ELionurus cíUnris (Humb. et. Kth. Nov. Gim. I. 193, t. 6:3). N. V. pasto crespo. BA. SF. C. T. S. O., etc. (Am. cal., Urug.). Grama abundante en las pampas y característica para ciertos para ges; suministra un pasto amargo. En verano, los animales solo comen las flores y no las hojas y otras — 510 — partes verdes, que no desdeñan sin embargo en invierno cuando está seca y no encuentran otro forraje mas dulce. Andropoíjon sccundus (Kth., Enum. I, p. 487). S. (Am. cal.). Andropogon lateralis (Nees. ab Es. in Mart. Bras. 2,329). E. (Bras. mer., Urug,). Andropogon saccharoides (Swartz, Fi. Ind. Occ. I, 205). P. BA. C. Ct. ; en las pampas, (Am. mer. y centr.). Andropogon ternatus (Nees ab Esenb. in Mart. Bras. 2, 326). BA. E. (Bras. mer., Parag.). Andropogon Monlufari (Kth. in Humb. et Bonpl. Nov. gen. et spec. ara. I, 184). E. C. y seguramente en otras provincias más, (Am. cal. Urug.) Andropogon tener (Kth. rev. gram. 11, 565, t. 197). E. C. (Am. cal., Urug.). Andropogon condensatus (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. am. I, 188.) N. V. pasto colorado. E. C. T. S. (Parag.).; en las pampas. Andropogon consanguinciu (Kth. Enum. I, p. 494). BA. E. SL. C. R. (Bras. Urug.). Andropogon laguriformis (Gr. Symb. n. 1993). C. (Bras. mer., Urug.). Todas las citadas especies de Andropogon son gramas de forraje cuya calidad es secundaria, algunas como el A. condensatus y A. consanguineus son amargas y por esto es que los animales las comen cuando recien están secas. Anatherum Domingensc (Fvoem. et. Schult. 2, 809). E. Corr. (Parag. Am. cal.). — 511 — Grama de forraje de calidad regular. Sorf/Znim iiutans (As. Gr. sec. Gr. Symb. n. 1995). T. S. J. (sierra baja) (Parag). Suministra un pasto duro pero alimenticio, sirve espe- cialmente para los animales vacunos y caballares. La paja se emplea para llenar caronas de aparejos, etc. * Sorghum vulgare (Pers., Host. Gram. IV, t. 2). N. V. maiz de Guinea \ en España panizo negro, alcandia ó saina. Grama originaria de la India Oriental y cultivada á veces en la K. A., v. gr., SF. C. Sgo. T. Las semillas son comestibles ; los árabes las usan para hacer pan, los negros del Brasil para hacer una bebida (llamada merisa), los italianos para fabricar la polenta, el macaroni, tortas, etc. El decoctado de las semillas ha sido recetado en enfermedades del pecho y también lo ha sido la médula tostada de la caña como remedio contra el lamparon. Con las panojas despojadas de las semillas ó ñores se fabrican escobas, bruzas, etc. El cocimiento de los zurrones de los granos tiñe la lana de rosa pálido con alumbre, y azul con nitrato de bismuto. La planta suministra un buen forraje. * Sorghum saccharatinn (Pers., Host. Gram. IV, t. 4). N. V. sorgo azucarado, sorgo chino, diirra. Grama originaria de la India Oriental y de Arabia, cultivada especialmente en Francia, Norte- América, etc. De algunos años á esta parte, se han hecho, en las cer- canías de Rosario de Santa-Fé, ensayos de cultura en grande escala para fabricar aguardiente con esta planta y para extraer el azúcar contenido en sus caños, ensayos que han dado ya buenos resultados. El cocimiento de los zurrones de los granos se usa para teñir, como se ha indicado para la especie anterior. — 512 — Cyperaceae. Cyperus rotundus (aut., vix L.). N. V. en España: juncia redonda, castañuela, cltinceta. BA. E. C. T. y seguramente en otras provincias más (Am., Australia, India Orient., África, Europa merid.). Los tubérculos amargos y aro.Dáticos {radix Cyperi rotan di) han sido oficinales y empleados como remedio estomacal, excitante, diaforético y emenagogo. en casos de indigestiones, catarros pulmonares, disuria, amenorrea, etc. Los indígenas de la India Oriental los usan (bajo el nombre mootha) contra el cólera. En Grecia, los comen y los emplean como especie. Se usan también para la fabricación de perfumes. * Cyperus csculentus (L. Host. Gram. 3, t. 75). N. V. juncia avellanada, chufa, cotufa. Es originario de África y del Asia; se cultiva en Corr. y quizas en otras provincias también. Los tubérculos aceitosos (bulbuli T lira si s. dulcínia) tienen gusto á almendras, sirven para emulsiones y se han usado en medicina para las enfermedades del pecho. En España, se fabrica con ellos una orchata y los^ comen crudos, tostados ó mezclados con pastas. Además, han sido empleados una vez tostados para sustituir al café y fabricar una harina llamada racahout. Cyperus odoratus (Vahl, Enum. II, 356); syn. Dicidium odoratum (Schrad. in Fl. Bras. fase. 4, p. 54). E. Corr. (Am. cal.). Los rizomas aromáticos tienen virtudes diuréticas, sudo- ríficas, estomacales, y se hace uso de ellos en casos de fiebres intermitentes. Cyperus ochraceus (Vahl, Enum. II, 325). N. V. tortoralUla, totoriVa. E. T. y seguramente en otras provincias más (Bolivia. Parag,, Brasil). — 513 — Cyperus flavomariscAis (Gr. Pl. Lor. 830). N. V. negrillo. BA. E. C. T. y otras provincias (Brasil). Cy penis refíexus (Vahl, Enum. 11, 299). N. V. negrillo. E. C. T., etc. (Urug., Chile). La infusión teiforme de los rizomas de las dos últimas especies citadas tienen pr()piedades diuréticas y diaforé- ticas, se emplean en casos de gonorrea y otras enferme- dades de las vias urinarias como también para fiebres intermitentes. Kgllingia Martiana CSchrad. in Fl. Bras. fase. IV, p. 14 ex descr.); syn. K. tríceps (Roüh. sec. Gr. Symb. n.2020). E. T. etc. (Brasil). Kgllingia odorata (Vahl, Enum. II, 382); syn. A', triceps (Sw. Obs. 33). N. V. capii-cati (trad. del guaraní: grama olorosa) ó capii-catí-payé (grama olorosa del brujo). Corr. (Parag. Brasil). Se emplea el rizoma íiromático, oleoso y agrio como diaforético y diurético, estimulnnte, estomacal y antiespas- módico contra la disenteria, diabetes, etc., y se toma en infusión acuosa ó vinosa. Los Pai-payagúas (del Para- guay) la propinan con gran misterio á los crédulos para excitar apetitos sensuales ó para hacer enardecer apagados afectos (Parodi, Ens. bot. med. arg. p. 69). Kgllingia brevifolia (Rottb. sec. Gr. Symb. n. 2021). E. (zona cálida). Los rizomas tienen probablemente las mismas propie- dades que los de las especies anteriores. Carex riparia (Curt. Lond. t. 60). BA. E. (Europa. América). Las cañas sirven para fabricar entretejidos, canastos y otros objetos. — 5U — •fimceae. Juncus acutus (Lam. Ene. III p. 268). N. V. rimé (BA.), junquillo, unq-uillo (C. SL.), itsillo (M,). P. BA. M. SL. C. R. S. J., (casi cosmopolito). Las frutas tostadas han sido recomendadas en casos de diarrea, metrorragia é liidropesia. Las cañas se usan para confeccionar canastos, esteras y otros olijetos. Juncus bálticas (Willd. Berl Mag. 1809, 298) var. crassi- culmis (Buchenau ap. Gr. Pi. Lor. n. 841 ; Syrab. n. 2066). N. V. junquillo. BA. M. SJ. R. Ct. 3. J. var. pictus (Phil. ap. Gr. Symb. n. 2066); syn. /. pic- tus (Phil. Linnaea 83, p. 268) et J. Lcsueurii (Bol. Proc. Calforn. Acad. 1863, II, 179), P. BA., (Chile). N. V. rimé. Las cañas se usan como las de Juncus acutus. Juncus stipulatus (Nees Mey. n. act. N. C. XVIII, supl. 1, 127). N. V. tripa del aguo. SJ. C. R. Ct., (Chile, Perú, Ecuador). Ignoro el uso que, quizas, se hace de esta especie. Liliaceae. * Allium sativurn (L. spec. 425). N. V. ajo común. Es originario del Oriente; se cultiva á veces en la R. A. La raíz {radix Allí i sativi) tiene virtudes diuréticas y antihelmínticas; se usa exteriorinente como rubefaciente, y también como especie en comidas de carne. * Allium Cepa (L. spec. 431). N. V. cebolla común. — 515 — Se cultiva en muchos puntos de la R. A. El empleo del rizoma como especie para comidas, etc. , es muj^ conocido. En medicina, se ha hecho uso de la cebolla triturada puesta sobre abscesos, úlcenis, etc., en forma de cataplasmas, para traerlos á supuración. Amanjllis mesodiloa (Herb. in Bot. Reg. t. 1345 et t. 1361: id. Amaryll. 170). E. C. Ct. T. Sgo S. J. O., (Urug. Bras. mer.). La cebolla triturada se usa contra quemaduras de la piel. Tiene linda flor y podría emplearse como planta de adorno. Ahtroemeria pelegrina (L. Amoen. VI, 347). Ct., (Brasil., Chile, Perú). Los tubérculos se usan en Chile y el Perú para la fabricación de una harma fina que se emplea especial- mente para alimento de personas enfermas. Agave americana (L. Amoen. acad, edit. Schreb. III, 22; spec. ed. 3. 461). N. V. pita-^ en Chile, maguei-^ en el Parag. cara- guata. Su patria es Méjico; se cultiva en muchas provincias de la R. A. para cercos vivos, etc., y se encuentra á veces casi espontánea. Las raices se han usado como remedio contra la sífilis y son diuréticas, como lo son también las hojas. El de- coctado de estas es estimado en el Brasil como el mejor medio de estirpacion de sabandijas, etc. De la savia de la planta, que se extrae cortando la yema terminal y ahuecando el tronco en la sección hechn, dejando el zumo juntarse en esta cavidad, se hace en Méjico una bebida fermentada (llamada pulque ú ocli), aguardiente (de maguey) y vinagre. Con las ñbras de las hojas, se trabajan tejidos, cordones, etc., y la parte blanda de los pedúnculos es un ma.terial muy bueno para fondos de — 516 — cajoncitos destinados á conservar colecciones de insectos, etc. y para la fabricación de yesca. * Asparagus officínalis (L. spec. 448 excl. var. b.). N. V. espárrago. Es originario de Europa, se cultiva á veces en la R. A. y se halla espontanea en las quintas de Córdoba. La raíz y los renuevos {radix et turiones Asparagi) han sido oficinales y contienen asparagína, substancia diurética poderosa y que dá á la orina un olor desagradable ; han sido empleados contra exantemas, hidropesía subcutánea, ascitis, enfermedades del corazón; parálisis de la vejiga, etc ; en Francia se usan todavía en forma de jarabe (sy- nipus Asparagi). Las frutas y semillas son también diuréticas. Los renuevos se comen cocidos y son muy apreciados como legumbre. Herrería ríiontevidensis (Klotzsch ap. Gr. in Fl. Bras. fase. 5, p. 24). N. V. zarza-parrilla. E. S. J. (Urug. Brasil). Según Lorentz (Veg. del N. E. de Entre -Rios p, 94), se usan las raices como las de las verdaderas zarza- parrillas. Smilax campestris (Gr. in Fl. Bras. tase. 5, p. 15). N. V. verdenazo, zarza, zarza-parrilla, sacha-mora. BA. T. S. J. O. y seguramente en otras provincias más, (Bolivia, Parag., Brasil merid.). Smilax rubiginosa (Gr. in Fl. Bras. fase. 5, p. 14). N. V. zarza- parrilla blanca. Las raices de estas dos especies indígenas tienen las mismas propiedades que las de Smilax medica (Schlecht) y en la R. A. se emplean en lugar de estas para casos de sífilis, reumatismos, gota, etc. — 517 — Pontederiaceae. Eichhornia azurea (Kth. Enum. pl. IV, 129; Seubert in Fl. Bras. fase VIII, p. 90). N. V. camalote, ayupéi. BA. SF. E. Corr. (Parag., Am. cal.). Eichhornia speciosa (Kth. Enum. pl. IV. 131 ; Seubert in Fl. Bras. fase. VIII, p. 92); syn. Pontederia eras- sipes (Mart. Nov. Gen. et Spec. I, 9, t. 4). N. V. camalote, agua peí. BA. E. SF. Corr. (Brasil, Parag.). Son yerbas acuáticas que se crían en las orillas de los grandes rios y de las lagunas. La infusión de las flores es, según dicen, un excelente cordial. El cocimiento en vino colorado de las raices ú hojas secas se usa en casos de disenteria, gonorrea, flores blancas, etc. Las hojas írescas aplicadas en la frente calman el dolor de cabeza. Irldeae. Eleutheria plicata (Herb. in Bot. Reg. t. 57, Klatt in Fl- Bras. III 1, (fase. 53), p. 514, t. 64). N. V. sacha-cebolla. T. S. (Am. cal.). Ignoro si se hace algún uso de esta planta. Landsbergia cathartica (Klatt in Linnaea 31, p. 549). N. V. ruibarbo del campo. Corr. (Parag. Urug. Brasil). Las raices tienen propiedades tónicas, estimulantes y purgantes. Herbert/ia strícta (Gr. Symb. n. 2119). E. Las cebollas se comen (seg. Lorentz) cocidas en el puchero. * Iris flor equina (L. Mat. med. 44). — 518 — * Iris paluda (Lam. ene. 3, p. 294). N. V. lirio. Son plantas originarias de la Europa meridional ; se cultivan á veces como plantas de adorno en quintas y jnrdines de la R.. A. y la segunda se ha puesta espontá- nea cerca de las acequias, bordes de rios, etc. Los rizomas {rhiz. Ireos s. Iridis (lorentinae et palli- dae) son purgantes cuando son frescos ; secos son algo estimulantes, aperitivos, diuréticos, expectorantes y des- piden un olor á violetas. Se dan, además, á las criatu- ras durante la primera dentición, para que las muerdan, lo que, según se dice, favorece la salida de los dientes. En polvo, se usan para aromatizar cosméticos y jabones, para envolver pildoras y para la fabricación de perfumes. Bromeliaceae. * Bromelia Ananas (L. spec. ed, Willd. II, p. 7). N. v. ¡ñña, ananas. Es originaria de la América tropical; se cultiva raras veces en O. J. S. Corr. Las frutas maduras son deliciosas y se comen crudas y en forma de dulces. Se usan también para dar á los enfermos de fiebre é ictericia. Con el jugo se hace una bebida que embriaga. La fruta no madura es diurética, antihelmíntica y hasta abortiva. Con las fibras de las hojas puede fabricarse un tejido muy fino. Bromelia serra (Gr. Symb. 2135). N. V. cháguar, chaguara. C. Sgo. T. S. O. J. Ch. Se usan las hebras de las hojas para hacer hilo, cuer- das, tejidos, y los indios del Gran Chaco saben con ellas trabajar bolsas, ponchos y camisas, en las que pretenden no pueden penetrar las flechas. Los rizomas tostados en la ceniza sirven de alimento á los indios en casos de penuria. — 519 — Chevalliera grandiceps (Gr. Symb. n. 2136). N. V. yerba del pájaro. T. S. J. O. (Bolivia). Planta epífita en árboles. Ignoro el uso que se hace de ella. Dijckia floribunda (Gr. Symb. n. 2140). N. V. cháguar de Las peñas. C. SJ. R. Ct. (sierras). No le conosco uso. TUlandsia rubra (R. P. Fl. per. t. 266). N. V. cháguar del monte. T. S. J. O. (Perú). Epífita en árboles de los bosques sub-tropicales. Los rizomas tostados en la ceniza son comestibles. Dentro de las vainas de las hojas, el agua llovida se conserva en cantidad considerable y por mucho tiempo, asi es que ios viajeros pueden aprovecharse de esta agua al atrave- sar los terrenos en que no se halla otra agua potable, pero se dice (^ue, tomada en cantidad considerable, esta agua enferma y produce la fiebre intermitente ó el chuchu. Tillandsia macrocnernis (Gr. Symb. n. 2142). N. V. flor del aire blanco, azahar del aire, clavel del aire» C. SL. Sgo. R. Planta epífita en árboles. Las fibras de las hojas pue- den emplearse para fabricar tejidos. Las flores blancas y lindas tienen un aroma muy agradable y de ellas se hace una tisana con la que los campesinos curan las en- fermedades del corazón. Las plantas se usan para hacer coronas de adorno. Tillandsia dianthoidea (Ten. sec. Gr. Symb. n. 2147). N. V. flor del aire azul, clavel del aire. E. Corr. (Urug.). Bol. Acad. IV. 34 — 520 — Tillandsia ixioídes) (Gr. Symb. n. 2148). N. V. ¡lor del aire amarillo. E. Corr. Ch. (Umg.). Estas dos especies tienen lindas flores y se emplean para coronas de adorno. Ignoro si tienen otro uso mas. Tillandsia usneoides (L. spec. plant. 2, p. 15). N. V. cabello de ángel, barba de monte, barba de quemia ó del tabaquillo, barbón. E. C. Ct. T. (Am.). Es una epífita que cuelga de los árboles y arbustos de bosques húmedos, especialmente de las sierras, y se halla con preferencia en los árboles de queñ aa ó del tabaquillo (Polijlepis racemosa). Suministra un excelente material para envolver objetos frágiles, llenar almohadas y colchones, y los campesinos pretenden que las personas que duermen en estos no padecen nunca de reuma, como tampoco de dolor de muelas, y que mejoran de la sordera los que padecen de est'i enfermedad. Los Peruanos saben fabricar con esta planta un ungüento contra las almorranas. TiUundsia recúrvala (L. spec. pl. II, p. 7; Willd. spec. pl. p. 15). C. T. (Am. mer., Antillas). Es igualmente epífita en árboles y arbustos. Se emplea también del mismo modo y tiene los mismos usos que la anterior. Scitaniineae Maranta Tünchal (Aubl. sec. Gr. Symb. n. 2158). O. (Am. cal.). Tiene rizomas harinosos y comestibles una vez coci- nados. Caima (/lauca (L., Willd. spec. pl. 1, p. 4, enum. 1, p. 3). E. Corr. (Am. cal.). — 521 — Del rizoma, que tiene propiedades ligeramente diuréticas y diaforéticas, puede extraerse una especie de almidón (arrow-root). * Canna indica (L. spec. pl. ed. Willd. I, p. 3). N. V, achiras \ en Europa caña de la India, yerba del rosario ó cuentas, flor de cangrejo, cañacoro, etc. * Es originaria de las Antillas, del Perú, etc. ; se cultiva mucho como planta de adorno en la R. A. y se ha puesto espontánea en algunas partes de las sierras, v. gr., de la Sierra chica de Córdoba, Sierras de Tucuman. E! rizoma (jadix Cannae indicae) es diurético, diafo. rético, y se usa en enfermedades del cutis. Las semillas negras y duras se han usado como estomacal y de ellas puede ser extraído un lindo color rojo como también una harina muy fina que se usa como polvo cosmético. Son además empleadas para la fabricación de rosarios. Las flores se usan como succedáneas del azafrán. Canna achiras (Gillies). N. V. achiras. El rizoma contiene igualmente un almidón que podria emplearse en vez del arroiu-root. * Canna edulis (Ker. sec. det. Gr. Symb. n. 2160), N. V. achii-as. Es originaria del Perú, y cultivada en J. S. O. Es una especie muy aliada á las dos anteriores: Sus rizomas cocidos en el puchero ó asados en la ceniza son comestibles. Contienen en mayor cantidad que los de las especies anteriores un almidón fino semejante al arrow-root y que se emplea como este. Miisaceae. * Musa paradisiaca (L. Trew. Ehr. t. 18-20). N. V. plátano, platanero (S. O. J.) pacoba (Corr. Parag.); ademas en otros países banana, bananero higuera de Adán, higuera de las Indias, etc. — 522 — Yerba perenne gigantesca que parece árbol ; es origi- naria de las Indias Orientales y es cultivada principal- mente en S. O. J. Corr. y raras veces en provincias me- nos cálidas como T. E. Las frutas, cuyas semillas abonan regularmente en las plantas cultivadas, contienen mucha fécula, son dulces y de buen sabor. Se comen crudas ó cocidas y con ellas puede fabricarse una especie de pan y una bebida fermen- tada. Los brotes é inflorescencias nuevitas pueden comerse como verdura, las hojas anchas y largas pueden usarse para empaquetar ciertos objetos. Se puede hacer hilo con las fibras de las hojas. En medicina, se ha hecho uso de las frutas contra diarreas, enfermedades del pecho é inflamaciones del vientre; por fin, el zumo del t'illo es recetado contra enfermedades de las vias urinarias. * Musa sapientuin (L. Trew. Ehr. 4. t. 21-23). N. V. plátano caniburí, pacoba. Es igualmente originaria de las Indias Orientales; se cultiva en Corr. y quizas en otras provincias mas del Norte de la K. A. Las frutas son menos feculentas pero mas dulces, mas blíuidas y de sabor mas agradable que las de la especie anterior. De las hojas, etc., se hacen los mismos usos que de las de ésta. Orchldeae. Oncidium Bateinannianaiii (Parment, sec. det. Gr. Pl. Lor. n. 870). Ct. T. y seguramente en otras provincias más. Oncidium bifolium (Sims., Ic. Bot. mag. t. 1491). E. T. é indudablemente en otras provincias más, (Urug.). N. v. de las dos especies : flor de patitas. — 523 — Son epífitos en árboles y contribuyen mucho por medio de sus lindns flores amarillas á adornar las selvas sub- tropicales. Son también muy buscados para patios, etc. como plan- tas de adorno. Ignoro si se hace otro uso de estas plantas. Rliizocarpeae. Azolla fúiculoulcs (Lam. Ene. I, p. 343, t. 868), syn. .4. magclLmiica (Willd. spec. pl. V. p. 541) y su Víir. rubra (Strassb. Ueber Azolla p. 78) ; syn. A. rubra (R. Br. Prod. p. 167). N. V. Luc/ieciUo, también tembladerilla en Chile. Yerba acuática que en casi toda la K. A. está nadando en la superficie de las aguas estancadas y de los arroyos peciueños. Se recomienda su cultura en estanques arti- ficiales, por tener esta planta la propiedad de purificar el agua; puede además servir como comida alimenticia para gansos y patos domésticos. Lyeopodiaceae. Lj/copodiuin Saururus (Lam. Ene. Bot. v. 3, p. 625 sec. det. Gr. Pl. Lor. n. 877 et Symb. n. 2194). N. V. coUi de fjuiriquinclio. C. T. S. (sierras altas). La cola de quiriquincho tiene en sus efectos mucha semejanza con su aliado el />. Selai/o (L.) y, como este, es un emenagogo abortivo y purgante drástico muy fuerte. Los habitantes de las sierras dicen que tiene también propiedades afrodisiacas, que excita apetitos des- ordenados y que hasta cura la impotencia en el varón y la esterilidad de la muger. Eqnisetaceae. Equisetum bountense (Kth. in Humb. et Bonpl. nov. gen. et spec. pl. I, 42). — 524 — N. V. en Chile yerba de la plata. T. (Am. mer.). El decoctado de la planta se usa conio diurético en otras regiones de Sud- América. Er/uisehnn r/if/anteum (L. spec, Plant. ed. 11, 1517. n. 7). Ct. (Am. mer.). Eqaisetuiii ramosisshaum (Desf. Fl. Atlant. II, 398-399). C. E. Corr, (casi cosmopolita), Equisetum pyramidale (Goldm. Nov. Act. Acad. Nat. Cur. XI. suppl. I. 469). E. Corr. (Am. mer.). N. V. de las tres especies cola de caballo, cabayú- rityuay. Se usan estas especies, que probablemente no son bien distintas, como diuréticos y astringentes para la gonorrea' diarrea, etc. Todas las especies de Erjnisetwm producen un efecto venenoso en los animales vacunos que las comen. Con- tienen, relativamente, una gran cantidad de silicio (hasta 13 por ciento), que produce diarreas sanguíneas, aborto y flacura. Los animales caballares los comen sin que re- sulte daño alguno para ellos. Los tallos duros, á causa del sihcio que contienen, se usan para pulimentar madera y objetos de metal. Filices. Ane'nnia lovieiUusa (Sw. syn. fil. 157); y su var. f'ulva (Sw. 1. c). N. V. doradilla aromática ó hembra. Sierras de BA. C. SL. Ct. R. T. S, etc. (Bras. mer. Urug.). El decoctado de la yerba tomado como té, es, según dicen, un diaforético precioso y un excelente pectoral ; sirve de remedio contra los constipados pertinaces y lo — 525 — suministran también en los casos de sobrepartos y mens- truaciones suspemlidas. Se puede extraer de ella una especie de resina inirra y empleaii'i en pildoras como la verdadera (producida por especies de Balsa rundendron)^ es estomacal y, en dosis mayores, se emplea como la- xante y flegmagogo en enfermedades de los órganos res- piratorios; exteriormente, puede usnrse contra úlceras y heridas purulentas la tintura de esta resina. Adiaiituiít cuneatum (Langsdf. et Fisch. Ic. Fil. 23, t. 26). y su var. Veneris (Gr. Symb. sub. n. 2206). N. V. culantriilo (C), dorailillo (R.). E. C. R. T. Ct. S. etc.. principalmente en las sierras (Urug,, Bolivia, Brasil). Adi(intit/)u chilense (Kaulf. Enum. p. 207). syn. .1. thalic- troides var. chilense (Gr. Symb. n. 2207) et A. tenerurn var. rhomboideum (Gr. Symb. n. 220S! non Kth.). N. V. culantrillo. BA. C. R. Ct. (sierras), (Chile). Adiamnm 'polyplujllum (Willd. Spec. Pl. V, 454). O. (selvas subtropicales), (Bolivia, Perú, Guyanas. Brasil). La infusión teiforme hecha con la yerba de estos helé- chos se usa contra catarros como pectoral, béchico. sudo- rífico, aperitivo, diurético y emenrgogo; puede con ella prepararse un jarabe, como con A. Capillus Vcneris (L.), que taml)ien se usa contra catarros y como refrescante. Cheilant/ies chlorophylla (Sw. in Vet. Acad. Handl. (Stockholm) 1817, p. 76, sec. det. Gr. Symb. 2211). E. Corr. T. J. (Parag.). Tiene virtudes astringentes y flemagogos. Nut/iolaeiia nivea (Desv. Journ. Bot. III, p. 93). N. V. topasaire. SJ. C. Ct. R. T. S. — 526 - Según Schickendantz, las hojas secas, reducidas á polvo con sus esporas, provocan fuertes estornudos. .\ol;/iñloena flavens (Moovfí sec. det. Gr. Symb. n. 2'32'3). N. V. doradilla (verdadera). BA. C. SL. SJ. R. Ct. S. (sierras), (Am. mer.). Los campesinos usan el decoctado de la planta como diaforético, pectoral y laxante, y lo suministran también en los sobrepartos y menstruaciones suspendidas. Pteris pedaki (L. spec. pl. 1522). O. (Am. cal, Parag.), Ln infusión se usa como pectoral. Pteris (¡liad r i au rita (Retz. Observ. VI, 'o&). N. V. m.arnuruya. O. (zona cálida). Ignoro el uso que se hace de este helécho. Pteris aquilina (L. spec. 1533) var. araclnioidea (Baker Fl. Bras. fase. 49, p. 403); syn. Pt. escu/enta (Forst. Plant. escul. 74, n. 47) et Pt. arachnoidea (Kaulf. Enum. Fil. 190). C. (sierra), cosmopolita en las regiones templadas y cálidas). Los indígenas de Nueva Holanda (Australia) comen con la carne los rizomas tostados como pan. El rizoma de la forma genuina de Pt. aquilina (L.) se ha usado contra lombrices y diarrea. En Normandia, lo mezclan con. harina para hacer el pan ; en Rusia, la Siberia y el Japón se come tostado. Bleclmum occidentale (L. spec. pl. 1534). N. V. doradilla (BA.). BA. C. T. O. y seguramente en otras provincias más (Bolivia, Brasil, Urug.) Este helécho goza, según Parodi (Ens. bot. med. arg. p. 66), de cierto favor popular en las dolencias pulmona- res y en las afecciones calculosas del aparato urinario. — 527 — Lomaría capeiisis (Willd. spec. pl. V. 291); syn. L. procera (Spreng., syst. IV. 65, Gr. Symb. 2232). P. BA. C. (sierras), (zona cal. y templ. merid.). La raíz sirve á veces de alimento á los indios de Pu- tagonia, principalmente en tiempo de escasez. Acrosticlmm miiscosum (Swartz, syn. Fil. 10; fl. Ind. Occ. 3, p. 1591). Sierras de S., (Bolivia, Perú). Acrostichum viscosum (Swartz, syn. Fil. 10, 193). S. (sierra), (zona cal.). Acrosticlmm conforme (Swartz, syn. Fil. 10 et 191, t. 1, f. 1). C. T. (sierra), (Am. mer.). N. V. calüijuala. Se emplea la infusión teiforme de estos tres heléchos para dulcificar la sangre, especialmente en casos de sífilis y apostemas interiores. Tiene propiedades astringentes, sudoríficas y emenagogas, y se administra también en casos de reumatismos, los sobrepartos y fiebres intermi- tentes, se emplea además exteriormente para las contu- siones. Los serranos de Salta usan el jugo de las dos especies primeras para dar firmeza á la dentadura floja y contra inflamaciones de la garganta. Athijriurii Filix femina (Roth Tent. fl. germ. III p. 5?^). N. V. Ii Hecho hembra (en España). C. (sierra Achala), (Europa, Am.). El rizoma {rhiznrna Filiéis f'eminae) es oficinal y, en Europa, suele sustituirse al verdadero helécho mas (As pi- el ium Filix mas Sw.) como vermífugo. El verdadero helécho -mas ha sido también mencionado por el Sr. Grisebach como indígeno en la R. A., pero ha sido por error (Pl. Lor. n. 914; Symb. n. 2251), habiendo dicho Señor confundido con este ejemplares de Aspidium pcUens (Sw.) y de Athyrium Filix femina (Roth.). - 528 — Aspidium patens (Sw. syn. 49). N. V. doradilla macho, negrillo, helécho macho. T. (sierra), (Am. cal. Chile). El rizoma tiene también propiedades análogns al del Aspidium Filix vías y se usa en T. como medi(;amento contra la tenia y otras lombrices. La infusión de las hojas y de los rizomas es usada en la R. A. contra la gonorrpa y los enfermos de síñlis la toman para dulci- ficar la sangre. Aspidium oonterminum (Willd. Sp. Plant. V. 249). y su var. oli(/ocarpuiii (Baker, Fl. Bras. fase. 49 p. 477). N. V. helécho mas, doradilla másenla. Sierras de C. SL. R. Ct. T., etc. (Am. cal.). Se usa del mismo modo que la especie anterior. Aspidium aculeatum (Swartz. syn. fil. 53) y var. phitij- phy/lum (Baker FL Bras. fase. 40, p. 462). BA. C. T. (sierras), (zonas tropicales y templadas). El rizoma tiene también propiedades vermifugas. La ceniza puede usarse para potasa. Cijstopleris fragilis (Bernh. in Schrad. neu. Journ. v. I, 2 p. 26). N. V. culantrillo (R.). C. R. Ct. T. S. ^sierras) (Europa. Am.). En la provincia de la Rioja se hace uso de este helécho en lugar de las especies de Adiantuon. Polypodium vaccinüfolium (Langsd. vi Fisch. Icón. Fil. 8). syn. P. bjcnpodioides (Gr. Pl. Luí', n. 924 et Symb. n. 2262. non L. spec Pl. 1542!). N. V. doradita. Es epífito en árboles de los bosques de BA. E. T. S., etc. (Urug. Brasil). Tiene propiedades sudoríficas y astringentes. Con la planta herbida, se preparan baños en casos de hidropesía. — 529 — Pubjpodivm iiicanum (Swartz. Syn. Fi]. 35). E. T. Es epífito en árboles. Tiene virtudes vermífugas. Pobjpodium niacrocarpum (Prl.). BA. SL. C. T., etc. (sierras), (Am. mer.). Es epífito en árboles y se cria en las peñas. Puf'ijpodium loriceum (L. spec. plant. 1546). C. T. S. (sierras), (Am. cal.). Se cria en las peñas. Estas dos especies poseen propiedades laxantes, pecto- rales y astringentes. Hymenomycetes. Ágaricus cnmpcstris (L. suec. 1203). N. V. en España seta ú hongo comestible, calliampa en Chile, cham pignon en francés. Se cria en toda la R. A. (es cosmopolita); y también es cultivado. Es comestible y se come preparado de diversos modos. Ágaricus fascicularis (Huds. Fr. Hym. Europ. p. 291) var. ineijapotamicus (Speg. Fungí Arg. pug. IV, p. 8) BA. Es prol)ablemente un hongo venenoso. Discomycetes. Cgltaria Darwinii (Berk.). P., Tierra del Fuego. Es un hongo comestible y forma durante algunos meses del año el alimento principal de los indígenas de la Tierra del Fuego. Deben además, existir en la República Argentina otros hongos mas que son comestibles ó tienen propiedades venenosas. Lichenes. Usnea /Jieruiiynii (Krempelhubur in Bol. Ac. Nac. t. III p. 103). — 530 — N. V. barba de piedra. En piedras de las sierras de C. T. S. O. J., etc. Se administra el cocimiento de este liquen á las niñas cloróticas. Es empleado para, lavar llagas ulcerosas y verrugas, y lo usan también en polvo para curar llagas. Con la aplicación de cataplasmas hechas con la planta triturada, dicen que desaparecen los pasmos y el dolor de muelas. La infusión sirve para teñir de color naranjado oscuro ó caña; para ello, se hace un agujero en la tierra en el que se echan brazas y encima la barba esponiendo al humo el objeto que se quiere teñir. Usnea barbata (L. emend. ; Fr. Sched. cr. IX, p. 34. Lich, europ. p. 18). En árboles de los bosques de C. T., etc. Usnea anf/ulata (Ach. Nyl. Syn. meth. p. 372). En árboles de los bosques de Ct. etc. N. V. de las dos especies: bai-ba del monte. Se usan com.o la barba- de piedra. Raaialina fraxinea (L.; Ach. Lich. univ. p. 602). T. (sierra), (casi cosmopolita). Contiene liquenína y, cocida en agua y hecha jelatina puede usarse como estomacal y tónico en enfermedades del pulmón, de la misma manera que se emplea la Ce- traria islándica. Peltigera polydactyla (Hoflm., Rabenh. Handb. II, 1, p. 67). Sierras de C. S. T. (Europa, América). En Europa se ha hecho uso de este liquen en casos de lombrices. Urceolaria scruposa (Ach. Lich. univ. p. 338). En el suelo y en cascaras de árboles (Europa, Am). Con esta planta puede obtenerse el color orchilla azu- lada. — 531 — fíhizucarpon geographicum (DC. Fl. Fr. p. 366). C. T. (sierras); en las peñas. De este liquen puede también extraerse un color azul. Pasamos aqui en silencio á todos los hongos parásitos que existen en la República Argentina y que deberían figui-ar en el cuadro de nuestra obrita, por ser ellos da- ñinos sea al hombre y á los animales, como causa de va- rias enfermedades, etc., ó como destructores de vegetales que el hombre cultiva. Dejamos esta parte de nuestra tarea á hombres de mas competencia en el ramo de la micologia, remitiendo al lector á los excelentes trabajos sobre los hongos de la República Argentina que está pu- blicando el Señor Dr. Don Carlos Spegazzini en los Ana- les de la Sociedad Científica Argentina. yorge Hieronymiis. Córdoba, Diciembre 1H82. REGISTRO DE LOS NOMBRES científicos. A. Página Acacia Aroma Gilí 289 — — var. moniliformis Hier 289 — atramentaria Benth 289 — bonariensis Gilí 290 — Cavenia Hook. Arn 29U — Cebil Gr 2S2 — furcata Gilí 288 — monilifomiis Gr 289 — — var. cochlearis Gr 289 — pauiculata Willd . 288 — portoricensis Willd 290 — praecüx Gr 288 — Prosopoma Schnyd 289 — riparia var. subscandens Gr 288 — — — tiicumanensis Gr 288 — tucLimaneiisis Gr 288 — Visco Lor 288 — Visite Gr 288 Acaena pinnatilida ti. P 299 Acalypha cordobensis Müll 451 Acanth'iceatí 40o Acantbocladus microphyllus Gr 228 Acantholippia hastulata Gr 407 salsoloides Gr 407 Acanthospermum hispidum D. C 344 — xanthioides D. C 844 Acanthosyris falcata Gr. 44o — spiíiescens Gr 443 Acentra serrata Phil 226 Achyrocline flaccida D. C 344 Aciiistus arborescens Schlcht 387 — australis Gr 387 — — var. grandiñorus Gr 387 — parviflorus Gr 387 Acrocomia totai Mart 475 — 534 — Página Acrostichum conforme Sw 527 — muscosum Sw 527 — viscosum Sw 527 Aíítinostemon anisandrus Hier 453 Adesmia hórrida Gilí 271 — pinifolia Gili 271 — subterránea Cls 271 — tiijuga Gilí 270 Adianthum Gapillus Veneris L 525 — chilense Klf 525 — cuneatum Lgsdf. Fsch 525 — — var. Veneris Gr 525 — polyphyllum Willd 525 — tenerum var. rhoniboideum Gr 525 — thalictroides var. chilense Gr 525 Agaricus campestris L 529 — fascicularis var. megapotamicus Speg 529 Agave americana L. . , 515 Agonandra excelsa Gr 255 Agrostis Antoniana Gr 491 bromidioides Gr 490 — canesceus Gr 490, 491 — distichophylla Phil 489 — eminens Gr 491 — exaspérala Kth. Tr 491 — fulva Gr 491 — laxiflora var. aristata Gr 491 — nana var. aristata Gr 491 — nardifolia Gr 490, 491 — patagónica Phil 491, 492 — rosea Gr 491 Ailanthus glandulosa Desf 251 Aira antárctica Hook. til 496 — Kingii Hook. fil 496 — magellanica Hook. fil 496 Airopsis jabata Gr 496 — millegrana Gr 496 Alcea rosea L 230 Alchemilla pinnata R. P 299 Alismaceae 471 Allimii Cepa L 514 — sativum L. . . , 514 Alnus ferruginea var. Aliso Gr 464 Alopecurus pratensis L 479 Alsine media L 229 — 535 — Página Alstroemeria pelegrina L 515 Alternanthera Achyrantha R,. Br 422 — polygonoides R. Br 422 AUhaea rosea Cav 280 Amarantaceae 419 Amarantus chlorostachys Willd 420 — crassipes Schlcht, 420 — deflexus L 420, 421 — muricatus Gilí 421 — undulatus K. Br 420 Amaryllis mesochloa Herb 515 Ambrosia artemisiaefolia L 845 — scabra Hook. Arn 345 — tenuifolia Spr 845 — — var. scabra Hier 345 Ammi majus L 826 — Visnaga Lam 826 Ampelideae 259 Amygdalus communis L 293 — pérsica L 292 Anacardiaceae 263 Anagaliis alternifolia Cav 364 — arvensis L 865 — latifolia L 365 Ananasa sativa L 435 Anatherum Domingense Roem. Schlt 510 Anchietea sajutaris St. Hil 224 Andropogon condensatus Kth 510 — consanguineus Kth 510 — laguriformis Gr 510 — lateralis Ns 510 — Montufari Kth 510 — saccharoides S\v 510 — secundus Kth 510 — tener Kth 510 — ternatus Ns 510 Aneimia tomentosa S\v 524 — — var. fulva Sw 524 Anemone decapetala L 208 — triiübata Juss 208 Anemopaegma clematideum Gr 400 Anonaceae 210 Anona Cherimolia Mili 210 Anthemis Cotula L 352 Aphelandra Hieronymi Gr 403 Bol. Acad. IV. 35 — 536 -• Página Aphora catamarcensis Gr 449 Aphyllocladus spaitioides Wedd o58 Apium Ammi Uib 325 — graveolens L 326 — Petroselinum L 327 Apocynaceae 367 Arachis hypogaea L 271 , Araliaceae 330 Araucnria brasiliana A. Rich 469 Arauja albens Don 37Ü Argeraone 213, 215 — mexicana L 213 Argithamnia catamarcensis Hier 449 Argyreia megapotamica Gr 376 Argyrochaeta bipinnatifida Cav 345 Aristida complanata Tr 489 — interrupta Cav 488 — mendocina Phil 488 — pallens Cav 489 — riparia Tr 489 — setifolia Kth 4-^8 ~ stricta Mich 488 Aristolochia angustifolia Cham 436 — argentina Gr 436 Aristoiochiaceae 435 Aristolochia fimbriata Cham 436 — Giberti W. Hook 435 — macrom'a Gómez 435, 436 — parviflora Gr 4:;')6 Arjona patagónica Hombr. Jacq 442 tuberosa var. patagónica A. D. C 442 Armeniaca vulgaris Lam.. 294 Armoracia rusticana FJ. Wett 217 Aroideae 472 Artanthe adunca Miq 436 — lanceaefolia Miq 437 Artemisia Abrotanum L 353 — Dracunculus L. . 353 — Echegarayi Hier 354 — Mendozana D. C 354 Arundo Donax L 492 — occidentalis Sieb 492 Asclepiadeae 370 Asclepias campestris Dcne 371 — curassavica L 371 ] — 537 - Página Asparaguá officiiialis L 516 Aspidium aculeatum Sw 528 — var. platyphyllura Bak 538 — contermiimm Willd 528 — — var. oligocarpum Bak 528 — Filix mas Sw 527 — patens Sw 527, 528 Aspidospeniia Quebracho blanco Schlcht. . . 264, 368, 369 Asterisciuin chilense Cham. Schlcht 325 — polycephalum Gilí. Hook 325 Asterostigma vermitoxicum Gr 473 Astragalus Garabancillo Cav 270 imifültus L'Her 270 Astronium juglaudifolium Gr 264 Atamisquea emarginata Mrs 224 Athyriuní Filix femina Roth 527 Atriplex Lampa Gilí 427 — Montevidensis Spr 427 — pamparum Gr 427 patagónica Benth. Hook 427 — undulata Benth. Hook 427 Alropis carinata Gr 498, 493 — magellanica Desv 499 Avena barbata Brot 496 — hirsuta Roth 496 — leptostachys Hook. fil 497 Azara salicifoha Gr 227 Azolla filiculoides L^am 523 ._ _ var rubra Strbg. 523 — magellanica Willd 523 — rubra R. Br 523 Azorella caespitosa Cav 324 diapensioides As. Gr 324 — GiUiesii Cls 324 — glebaria Cls 324 — madrepórica Cls 324 Baccharis artemisioides Hook. Arn. 342 — articulata Gr 343 — — Pers 342,343 — calliprinos Gr 341 — . coridiíblia D. G 341 - 538 — Página Baccharis cylinr. D. Aui;u.st() Grisehach I Lista tle las jíulilicacioiiL-s recibidas jior la Academia desde 1*^ de Enero hasta 15 de Mayo l8Sl V Documentos oficiales XIII USCAK DOERING. Algunas Observaciones sobre la conveniencia de fundar un Observatorio Magnético Nacional XXIII Nómina de las publicacionss recibidas por la Academia desde el 16 de Mavo al 31 de Diciembre de l¡S8i LXVUI PARTE CIENTÍFICA. JiiRGE HlERONYMUS, Sertum Sanjuaninum ñ descripciones de plantas fanerógamas v criptógamas vasculares recolectadas por el Di-. D. Saile Kchegaray en la l'rovincia de San Juan 1 JORGE HlERONYMUS, Sobre la necesilanta híbrida nueva, formada por el Lycium elongatum (Miers) y el Lyciuní cestrnides (Schlecht), con lámina 102 Enrique Lynch Arribálzaga, Catálo,t;i> de los Dípteros hasta ahora descritos ijiie se encuentran en las Re]>úblicas del Rio de la IMata lOy Página KuuARüo Ladislao Holmberg, Ühservatlons a propos du soiis-ordre des Arai,ü,nées 'rt-rritelairt-s ( 'I' e rri t c1 ariae ) spécialfiiient du genre N(ird-Aniéricain Catadysas, llENTZ ut de la iiouvelle fainillt- Mecicobothrioidae, lliiLMB., avec I planche •• .. lo3 UstAR ÜOKRING, ¡Medición Baiométrica de algunas alturas de la Sierra de Córdoba 175 O. NORDSTEDT, Sobre algunas Algas de la República Argentina l8l Gil a. R. Smit, Bronquitis ocasionada poi- Strongylus Filaiia (Dies.) 188 P. T. Cleve, Deteriuinaciones de Diatomáceas de la República Argentina lyi J. lliKRONYMUS, PlanicE diaphorica flúrcB argentina ó revista sislein:itica de las plantas ineilicinales, aliiueiitieias ó de alguna otia utilidad y de las venenosas, que son iiidísienas de la República Argentina ó que, originarias de otros países, se cultivan ó se ci'ian es|)ontáneaniente en ella. . . I9L/ (J 251 338 DIGEST OF THE LIBRARY REGULATIONS. rary without the more thaii five vol- pecial vote of the No book shíill be taken from the record of the Librarian. No persoii shall be alíoiwed to reí umes at any oiie time, linlsss JSy Council. Books may be kept out oH&scalendar month; no longer without renewal, and renewa/inay'^.not be granted more than twice. / \ A fine of five cents pe^lay incuri'eX for every volume not returned within the tim/specified bv th\ rules. The Librarian niaV demand the retuiT^ of a book after tlie expiration of teurdays from the date of Ikirrowing. 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