EL MEDICO BOTÁNICO CRIOLLO PARTE PRIMERA FLORA MÉDICA Y ÚTIL DE LAS ANTILLAS París. — Imprenta de Poupart-Davvl y C^, calle du Bac, 30. EL MÉDICO BOTÁNICO CRIOLLO POR D. Renato de GROSOURDY DOCTOR EN MEDICINA DE LA FACULTAD DE MEDICINA DE PARÍS EX-KEPETIDOR DE QUÍMICA EN LA MISMA FACULTAD, EX-PROFESOR PARTICULAR DE QUÍMICA Y BOTÁNICA MÉDICAS EN LA MISMA CILT)AD §OCIO CORRESPONSAL DE VARIAS CORPORACIONES CIENTÍFICAS FRANCESAS T ESTRANJERAS PARTE PRIMERA FLORA MÉDICA Y ÚTIL DE LAS ANTILLAS Y DE LA PARTE CORRESPONDIENTE DEL CONTINENTE AMERICANO TOMO I Conteniendo la Botílnica elemental ^ el Método dicotómico^. etc. Con miras tan sublimes como sabias, la vida de las plantas y la de los animales t-sláu enlazadas, la una con la otra, por medios tan sencillos como durádfros y que asombran. LiKBiG Inlrodiiccion á la Química orgánica. TOMO I (de la obra) parís librería de francisco brachet 8, CALLE DE l'aBBAYK, 8 1864 Tb/'^- \ k. n s? ;■> T 4 N I ,, ,1. DOCUMENTOS REAL UNIVERSIDAD LITERARIA DE LA HABANA. La obra que con el título de Fl Médico botánico criollo piensa V. dar á luz, fué examinada por una comisión del claustro de esta real Universidad, loque, al evacuar su informe, lo ha hecho en los tér- minos mas satisfactorios para V. Según la comisión, la obra está escrita bajo un plan enteramente nuevo, es rica en datos importantes y puede considerarse como la mas completa de cuantas hasta la fecha se han publicado con refe- rencia á las Antillas; la considera además útil j conveniente para toda clase de personas, porque abraza la ciencia bajo todos sus as- pectos. Enterado el claustro, y habiéndose conformado con el espresado dictamen, acordó se manifestase á V. que la Universidad coadyu- vará á la circulación del Médico botánico criollo recomendándolo del modo que considere mas á propósito. Dios guarde á V. muchos años. — Habana, junio 6 de 1860. — El Rector. Antonio Zambrana. INFORME DE LA COMISIÓN. Los catedráticos que tuvieron el honor de anunciar al claustro la obra de Botánica médica de Don Renato de Grosourdy, tienen hoy la satisfacción de informar sobre ella y de repetir que es un verda- dero tesoro para la ciencia. Su modesto título es El Médico botánico criollo, y se divide en dos partes : la Flora médica y útil de las An- tillas y, el Compendio de terapéutica vejetal de las mismas. La primera parte tiene una introducción en que se esplica su ob- jeto y plan, con citación de las obras que para su formación "e han consultado; un discurso preliminar en que aparecen todos los datos científicos que tienen relación mas ó menos directa con la botánica, de cuyo conocimiento se hacen aplicaciones diversas á la economía doméstica, á la agricultura, etc., terminándose con un resumen muy completo de geografía botánica. Siguen á la introducción y al discurso preliminar unos elementos de botánica igualmente com- pletos, en que los ejemplos se toman de las plantas mas conocidas délas Antillas, con sus nombres vulgares: se comprende en esta parte el método dicótomo, y para él se describen las plantas, cuyo número pasa ya de 2,000, y se termina por un apéndice de agricul- TOMÜ 1 II DOCUMENTOS. tura j tres índices alfabéticos, castellano, francés y latino. Esta parte es el resumen de mas de cincuenta volúmenes, conteniendo los trabajos orijinales del autor, y constará de dos tomos. Bl Competidlo de terapéutica, que constará así mismo de dos to- mos, comprerde estudios prácticos hecljos sobre las plantas de estos paises, consideradas va como medicamentos, ya como venenos, ya como sustancias alimenticias, señalando además sus otros usos do- mésticos y sus varios empleos en las artes. Esta segunda parte es igualmente rica en datos y está severamente arreglf.da á los buenos principios científicos. En una palabra, £Jl Médico botánico criollo es la obra de un pro- fesor de conciencia que posee los mas completos y exactos conoci- mientos en la ciencia, de un profesor conocido, doctor en medicina de la facultad de Paris, encargado durante seis años de las repeti- ciones químicas en la escuela práctica de la misma facultad, profe- sor particular de química é historia natural y miembro de muchas sociedades sabias, del cual tenemos en nuestro poder un tratado de química considerada en sus aplicaciones á la medicina, en dos volú- menes. El Dr. de Grosourdy posee de un modo admJrable el conocimiento práctico de las plantas de las Antillas, y su obra, repetimos, será una adquisición preciosísima. Los que suscriben se contentan con este breve pero exactísimo informe, pidiendo al claustro conceda al Dr. de Grosourdy el per- miso para anunciar que publica su obra bajo los auspicios de la real Universidad literaria. Esto es á cuanto aspira, dejando que los que deseen suscribirse, así catedráticos como alumnos, lo ha- gan espontáneamente. Quiere tener el honor de que la primera corporación científica de América aparezca protejiendo sus esfuer- zos, y seguramente el claustro, viendo que no hay que hacer el mas mínimo sacrificio, se complacerá en dar este nuevo testimonio de su ilustración y de sus benéficas tendencias. Habana y mayo 24 de 1860. — Dr. Ramón Zambrana. — Dr. Joa- quín F. de Aeníle. Persuadido del mérito de la obra que piensa dar á luz el Dr. don ílenato de Grosourdy, con el título del Médico lotdnico criollo, bajo los auspicios de la real Universidad literaria, cuyo claustro ha cali- ficado aquel mérito, recomiendo á los Sres. Directores de los cole- jios y escuelas que están en relación con la Universidad, la conve- niencia de que se proteja la suscricion á dicha obra, de cuya publi- cación deben resultar notables ventajas en favor de la ciencia y de la instrucción pública. Habana j junio 23 de 1860. — Él Rector, Antonio Zambrana. Í50CÜMENTÓS. III SUBDELEGACION DE FARMACIA DEL DISTRITO DE LA HABANA. Persuadido del mérito de la obra qiie piensa dar á luz el t)r. don Renato de Grosourdj, con el título del Médico botánico criollo, bajo los auspicios de la real Universidad literaria, cuyo claustro ha cali- ficado aquel mérito, recomiendo á los Sres. profesores de farmacia con oficina pública ó sin ella, la conveniencia de que protejan la suscricion á dicha obra, de cuya publicación deben prometerse no- tables ventajas en favor de la ciencia á que están dedicados y á la salud pública. Habana y junio 26 de 1860. — Dr. Cayetano Aguilera. (GOBIERNO, CAPITANÍA GENERAL Y SUPERINTENDENCIA DELEGADA DE HACIENDA DE LA SIEMPRE FIEL ISLA DE CUBA. Secretaría del GoUerno, CIRCULAR. Celoso siempre de todo adelanto que influya en bien del pais y de la humanidad en general, y penetrado al mismo tiempo de las im- portantes ventajas que reportarán el uno y la otra con la publica^ cion de la obra que trata de dar á luz el Dr. D. Renato de Gro- sourdy, con el título de El Médico botánico criollo , cuya primera parte comprende la Flora médica y útil de las Antillas, y la segunda el Compendio de terapéutica vejetal de las mismas, he tenido por conveniente impartirle la protección que de este Gobierno superior civil ha solicitado el promovente con el objeto de llevar á cabo su útil proyecto, que no es otro que estudiar co.icienzudamente las pro- piedades medicinales de cada una de las diversas plantas que pro- duce esta isla. Pero como quiera que para la investigación delicada y científica que se propone, necesita adquirirlos datos y noticias convenientes ala ilustración de su obra, encargo eficazmente á todas las autoridades á quienes ocurra, con esta circular, que le faciliten los medios mas adecuados, obvios y posibles al esclarecimiento indicado, ya por la esperiencia que tengan del pais, ya poniéndole en contacto con per- sonas capaces de ilustrar su propósito. Habana 18 de marzo de 1860. — Serrano. Sres. Gobernadores y tenientes Gobernadores de la isla á quienes esta circular fuere presentada. IV, DOCUMENTOS. Su Esceleiicia el general Fernando Cotoner, gobernador general de la isla de Puerto-Rico, tuvo á bien otorgarnos una circular por el mismo estilo para las autoridades de la isla de Puerto-Rico, de la cual hemos sacado mayor utilidad y provecho, pero sentimos no po- der transcribirla aquí por haberse estraviado. INFORME DE LA REA.L SUBDELEGACION DE FARMACIA DE SAN JUAN DE PUERTO-RICO. Escmo. Señor. Cumplida la orden superior de V. E. del 9 del mes próximo pasa- do, por la que se dignara disponer el examen de la obra escrita por el Dr. en medicina D. Renato de Grosourdv, titulada : « Medicina popular V doméstica de las Antillas, ó Compendio de terapéutica vejetal de las mismas, » esta real Subdelegacion tiene el honor de informar á V. E., por lo que como constancia pudiere importar en el asunto, que, sometida dicha obra durante treinta dias al examen, revisión y censura de dos distintos comisionados, han evacuado es- tos su cometido en términos científicos razonados tan satisfactorios, que como acto de deber, por de justicia, no vacila en suplicar á y. E. esta real junta, se digne prestar á su respetable autor toda la necesaria protección que merecen publicaciones tan importantes como esta, por los multiplicados beneficios que han de reportar á la ciencia, al pais y á la humanidad. Dios guarde á V. E., etc. — Puerto-Rico y junio 15 de 1856. — Escelentísimo Sr. — L. J. P. Rosello. REPÚBLICA DE VENEZUELA. SECRETARIA GENERAL, DEPARTAMENTO DE RELACIONES ESTERIORES, SECCIÓN SEGUNDA. Caracas, 18 de junio de 1862. RESUELTO. Deseoso el gobierno de conocer el mérito de la obra de botánica que ha compuesto el señor Renato de Grosourdv, doctor de la uni- versidad de Paris, y á la cual se refiere en su petición anterior, nombra por comisionados para su examen á los señores. doctor An- tonio José Rodríguez y Manuel Vicente Díaz, á los cuales se reco- mendará que investiguen, no solo su valor intrínseco, sino también DOCUMENTOS. Y SU aptitud para servir de testo en las universidades nacionales. Con el resultado de ese paso, S. E. decidirá sobre la demanda de auxilio que para la impresión del manuscrito ha menester el autor. Por S. E., Manuel Porras. Caracas y agosto 19 de 1862. RESUELTO. Sometida al examen de una comisión la obra de botánica que ha compuesto el señor Renato de Grosourdv y que se propone publicar en esta ciudad con el título áe El Médico botánico criollo, se ha ob- tenido como resultado que semejante trabajo es á propósito para la enseñanza en Venezuela, porque no solo clasifica las plantas útiles del continente y de las Antillas, sino también señala los usos que tienen en la medicina, como en la economía doméstica y en las ar- tes, siendo el complemento de los ensayos de este género empren- didos por otros profesores. Demás de esto, la publicación de obser- vaciones acumuladas en el espacio de diez años que el autor ha invertido en estudiar los países de esta zona, no puede dejar de dar á conocer á Venezuela en parte tan importante como el reino veje- tai, y esto hade contribuir por necesidad al adelantamiento de la República. Fundado en tales consideraciones, el Gobierno estima de mucha utilidad y digna del apoyo nacional la empresa del señor doctor de Grosourdy, y por vía de auxilio resuelve suscribirse á doscientos y cincuenta ejemplares de la obra. Por S. E., Rojas. PROLOGO, Si nuestra obra hubiera debido tener por lectores solo á los sabios j álos aficionados, ya al corriente de los conocimientos botánicos y prácticos en la determinación del sinnúmero de vejetales que la bo- tánica enseña á conocer y á clasificar, hubiéramos podido omitir sin inconveniente alguno escribir esa primera parte y pasar inmediata- mente á las aplicaciones médicas, pero por desgracia no es así ; hu- biéramos también podido pasar adelante si bastase señalar algunas obras de botánica con que nuestros lectores pudieran con facilidad y casi sin trabajo ponerse al corriente de la botánica teórica y prác- tica correspondiente á las Antillas y al continente vecino; unos po- cos quizás habria que se tomarian el trabajo de hacer las diligencias á propósito para conseguir tales obras ? Además sabemos en demasía cuánto es difícil y trabajoso, por no decir casi imposible, en los paí- ses en que estamos escribiendo estos renglones, proporcionarse las obras mas conocidas y mas vulgarizadas, y por tal causa no se po- drían pues proporcionar las obras de botánica que necesitarían y que de poco provecho serian para ellos, porque todas están escritas en idiomas estranjeros ó en latin, lo que es un obstáculo casi inven- cible á la vulgarización de los conocimientos botánicos en los países intertropicales y tropicales de oríjen español ; además de lo ya di- cho, una obra por el estilo de la nuestra tiene los datos que la for- man esparcidos en un sinnúmero de tomos perteneciendo á muchas obras diferentes, y no hay hilo conductor alguno para salir feliz- mente de tan molesto, fastidioso é intrincable laberinto. Para com- poner esa parte botánica nos hemos visto precisado á leer con ma- yor atención y estudiar con cuidado las obras inglesas de Lindley, la Flora de Jamaica por Macfayden, la Flora de las Indias Occiden- tales británicas de Griesbach, no concluida todavía, etc., las latinas siguientes : Prodromus, áQj)QC2i.Tiáo\e\Annales'botanices systematiú^ y Repertoomim lotanices systematiccB, de Guilelmo Gerardo Walpers : Plantari(^mvasmlarium,áQ Carolo FredericoMeisner;Sloane, Flora de Jamaica; la Flora de Cuba, por A. Richard; Endlicher, Genera 'plantarum, etc.; las francesas : de Aubelet,Florade la Guyana: de Descourtils, el Diccionario de Historia natural ; de d'Orbigny^ Plu~ mier, Tiissac, etc., y un sinnúmero de memoriales y de monogra- fías. Hemos tenido pues que sacar de todas estas obras y de muchas rocas calcáreas y con la incesante acción de los vejetales : hasta que VIII , TEÓLOGO. otras, como la de Knuth Flora equinoxial por ejemplo, lo que nece- sitábamos y que nos correspondía á nosotros para componer nuestra Flora médica j útil de las Antillas y del continente americano veci- no, tarea larguísima j muy ardua, que hemos tenido la suerte de poder llevar á cabo á costa de mucha paciencia, pertinazia y de con- tinuas vijilias. Hemos pues hecho todo lo posible para poner al al- cance de todos el modo de log'rar conocer con bastante facilidad los vejetales ó plantas útiles de los paises intertropicales y tropicales americanos, estudiados y conocidos hasta ahora de los botánicos so- los, y cuyo uso no ha podido hasta hoy dia entrar por tal causa en el dominio vulgar, y no han tomado en el hogar doméstico el lugar que sus propiedades bienhechoras les señala y les da derecho de ocupar. Eso puesto, hemos hermanado en esta obra la teoría con la prác- tica, y para hacerlo nos ha costado reunir en esta parte de nuestros trabajos todos los vejetales que corresponden sea directa ó indirec- tamente á la flora médica y útil de las Antillas y de la parte corres- pondiente del continente americano, tarea tanto mas ardua cuanto que hemos tenido que abrir una senda casi enteramente nueva, llena de escollos y de precipicios muy difíciles para evitar, porque no te- níamos guia alguna ; en fin hemos tenido la suerte de salir sano y salvo de ese mal paso, pero á costa de esfuerzos sobrehumanos : La- bor improhus omnia vincit. Hemos dispuesto la Flora médica y útil de las Antillas y de la parte del continente vecino correspondiente á ellas como sigue : con la denominación de discurso preliminar, hemos escrito un capítulo especial en que hemos agrupado cuantos datos y conocimientos úti- les hay que no cabían en otra parte alguna y no podían sin embargo omitirse; hemos pues señalado en él la importancia y utilidad tan poco apreciada de los vejetales, lo provechoso que es su estudio y la utilidad que reporta el de la botánica aplicada ; hemos dado razón de un sinnúmero de fenómenos que presenciamos diariamente y que por ser desconocidos pasan siempre desapercibidos, aunque su inte- lij encía sea muy útil tanto para la economía doméstica como para la agricultura, etc. Con el nombre de Prolegómenos hemos escrito un resumen de bo- tánica elemental, en que hemos recopilado lo mas sucinta y clara- mente posible los principios fundamentales de esta ciencia y reunido esplicándoles todas las palabras y vocablos que se emplean para de- signar los diferentes órganos y partes constituyentes de los vejeta- les ; sigue después el método dicótomo en que hemos dispuesto todos los géneros de tal manera que se puede llegar con mayor facilidad y con los mas escasos conocimientos botánicos á su determinación ó nombre científico , trabajo muy arduo y enteramente nuevo. Al principiar pues tan difícil, tan larga y tan fastidiosa tarea no hemos tomado en cuenta nuestras fuerzas débiles y, quizás atrevidamente, nos hemos engolfado á estudiar y en averiguar detenida y cuidado- samente lo que habia sido escrito ¿obre el particular, y bastantes veces hemos señalado caracteres específicos que habían sido olvida- dos ó que se habían quedado desapercibidos. Hemos pues agrupado PROLOGO. IX todos los géneros de las plantas útiles y médicas de las Antillas _v demás rejiones intertropicales americanas en una dicotomía botá- nica enteramente nueva, apropiada á esas comarcas y muchísimo mas completa que cuantas han sido publicadas hasta hoy dia para las plantas de algunas partes de Europa, como las de Francia verbi- gracia. Escusado es decir que para conseguir ese objeto no hemos nunca jamas escusado ningún trabajo, por fastidioso y penoso que fuera, cuando debia reportar provecho, proporcionando el modo mas fácil y mas sencillo para que uno pudiera lograr con poco tra- bajo conocer el nombre botánico de la planta que tiene en mano, cual poca práctica tuviera en la materia; y en este lugar siempre se halla la descripción de la especie mas común y mas conocida del gé- nero; al nombre del género sigue la letra F, que significa familia, con su número correspondiente seguido de una cifra romana, seña- lando el del género ó el lugar en donde se hallan descritas todas las especies que le corresponden, las cuales están también dispuestas en dicotomías parciales, á fin de facilitar su estudio. No es necesario decir que en esta segunda parte de la Flora, los vejetales están co- locados en sus familias, órdenes y tribus respectivos, cuyos caracte- res están estendidos con mayor cuidado. En seguida viene un apén- dice ó resumen de agricultura, dispuesto de tal manera que se tenga á la mano siempre la aplicación práctica de los datos científicos contenidos en el discurso de la Flora, apropiados para el uso de esas comarcas ; sigue en fin una noticia muy completa acerca de las ma- deras útiles de esos paises, su descripción, sus usos, etc., trabajo en- teramente nuevo. Escribiendo pues esa Flora para los que no saben nada de botánica, ha debido ser, como lo es en realidad, un profesor de botánica el que, tomando á uno por la mano, aunque no tenga ningún conocimiento, le acompaña, le guia por el camino florido de esta ciencia tan agradable como útilísima, y le lleva así insensible- mente y casi sin trabajo ninguno hasta su cumbre, de donde, tras- formado ya en aficionado, puede bajar solo, divertido y descansado de sus demás ocupaciones , con las manos llenas de plantas que ha reconocido y clasificado y que es capaz de utilizar tan pronto para sí mismo y para los suyos, como para los infelices que lo rodean. Echando entonces una mirada hacia atrás, se quedará admirado del sinnúmero de vejetales sembrados por el Divino Hacedor para que el hombre saque de ellos utilidad y provecho, pues que nada hizo en vano, ni tampoco solamente para hermosear su obra, porque tan su- blime y tan perfecta salió de sus manos, que no necesitó nada mas I ADVERTENCIA ACERCA DE LAS ABREVIATURAS EMPLEADAS EN EL DI3CUES0 DE ESTA OBRA. C. T. V. Compendio de terapéutica vejetal. F. significa (en el Compendio^ formulario. 'pié:!'. " pulgada : 1". "' línea: V" . F. significa (en la Floral familia T. tribu. S.-T. sub-tribu. S.-F. sub-familia. O. orden. S.-O. sub-órden. G. género. M. D. método dicotómico. DISCURSO PRELIMINAR Antes de pasar mas adelante es preciso saber que el reino vejetal fué el principio de toda organización y que el primero salió de las manos bienhechoras del Criador ; laboratorio de química viviente j organizadora que admirablemente dispuso para que se agrupasen entre sí las moléculas integrantes de un escaso número de cuerpos simples inorgánicos, y formasen así las partículas orgánicas, las cuales hablan de producir mas luego los órganos de vejetales muy sencillos que habian de alimentar á los animales tambicn de organi- zación muy sencilla que aparecieron los primeros. Pareció en fin el dia en que hubo tregua en la lucha entre el fuego j el agua, repartiéndose el globo, teatro de su batalla; pero un mar sin límites cubria la tierra, en el cual sobresalían unas cuantas islas, que recibian calor, no del sol, cubierto de nieblas, sino del fuego interior; bajo aquella atmósfera hirviente, desprovista de oxíjenoy sobrecargada de vapor acuoso y de ácido carbónico, rasgada á cada instante por el rayo, ningún animal podia vivir, á no ser los peces, los pólipos y moluscos en la mar. Pero la vejetacion desplegaba una actividad inmensa, y las islas enjutas se cul3rieron entonces de ar- bustos vasculares de organización sencilla y de pronto incremento ; colosales equisetos, heléchos arbóreos, y algunas palmeras, poco di- ferentes en especies, pero cuyos individuos se multiplican, crecen y mueren con indecible rapidez; su vida descompone incalculable can- tidad de ácido carbónico y de agua, al paso que fija el hidrójeno y el carbono, con lo cual el aire se purifica adquiriendo oxíjeno, y llega á ser posible la aparición de los animales terrestres. Sobreviene en- tonces una revolución en la faz de la tierra y los inmensos lechos de aquellos vejetales son sepultados y convertidos en carbón fósil ó uUa por la presión de los estra,tos sobrepuestos y por el calor del globo. Sucédense otras edades geolójicas, otros dias de la creación, en los cuales las islas se estienden, se puebla la faz del mundo, primez'o de reptiles gigantescos, que viven en una atmósfera todavía impura, la cual se va sanificando con la precipitación de los rudimentos de XII DISCURSO PRELIMINAR. luego vienen los mamíieros, las aves, los insectos, á cada nueva re volucion, acercándose mas j mas á las formas actuales; y última- mente aparece el hombre, señor de todo lo creado. La Génesis y los escritos de los geólogos prueban sin contestación alguna que los vejetales fueron los primeros seres que aparecieron sobre la tierra. Enla Génesis seiee en efecto : Dixit vero Deus : Con- gregentur aqu(B, qua sub cedo sunt, m locum unum, et appareant árida. Et factum est ita. Et vocavit Deus árida terram, congrega- tione7}ique aquarum ai^yellamt maria, etvidit Deus quodesset bonum, et ait : Germinet térra lierlam mrentem et facientern semen, et li- gnurn, pomiferum faciens fructurtí jtixta gemís suum, cujus semen in semetipso sit swper terram. Et factum est ita. Et p'otvMt térra herbam vire?iter/i et facientem semen juxta genus suum, lignumque faciens fructwm et liabens iimimquodque sementem secunduní spe~ ciem suam. Et vidit Deus quod esset honum, et factum vcspere et mane diei tertii. Llegó pues el momento en que el agua pudo co- menzar á condensarse y permanecer líquida en la superficie de la tierra, reuniéndose en estensas masas para formar lagos mayores y vastos mares. Aparecieron entonces los primeros seres organiza- dos, comenzando por les vejetales y siguiendo los animales acuáti- cos marinos que animaron la superficie de la tierra. Así piensa el geólogo Boubée, pero Lecocq admite como probable que debieron presentarse en este período animales de cuerpo blando y jelatinoso semejantes á los zoófitos actuales, al mismo tiempo que vejetales débiles, fáciles para descomponerse y sin formas bien determinadas. Estos seres primordiales, resultando de composiciones elementales superiores, debieron aparecer tan pronto como la temperatura del agua y de la superficie húmeda de la tierra dio lugar á su desarro- llo, comprobándose así una verdad proclamada hace mucho tiempo por Hipócrates en el aforismo siguiente : Ignis omnia per om7iia moveré potest ; aqua omnia per omnia nutriré. En esta época, pues, la vejetacion debió tomar un ascendente estraordinario y las plan- tas ser todas gigantescas, los animales acuáticos, los reptiles y los anfibios multiplicarse con espantosa facilidad ; en efecto, el calor que reinaba entonces por toda la superficie del globo y que era igual todo el año debia favorecer muchísimo ese desarrollo de la organi- zación con la influencia de la humedad y de una proporción muy considerable de ácido carbónico en la atmósfera; vemos en efecto la vejetacion ser mucho mas activa y mucho mas lozana en los países cálidos que en los templados. Al tercer dia de la Génesis, que corresponde á la segunda época geolójica de Boubée, las aguas se han reunido, aparece la tierra seca, y los vejetales son al momento criados para habitar el globo, cuyos terrenos se hallan caracterizados especialmente por impresio- nes vejetales. En efecto, después de un tiempo mas ó menos largo, la vejetacion, como tipo de la organización mas sencilla, debió apa- recer bajo la influencia organizadora de los aj entes imponderables sobre los elementos que habían de combinarse ; pero debemos ad- vertir que en esta época solo los vejetales de organización mas sim- ple pudieron presentarse por falta de la acción benéfica del sol y DE LOS VEJETALES. XIII porque el estado de la atmósfera y del globo no permitía que el desarrollo orjíánico pudiese verificarse con toda su perfección. El Criador, que todo pudo haberlo hecho en un solo momento, graduó el desenv-olvimiento y la aparición de nuevas fuerzas que sucesiva- mente perfeccionaron las producciones orgánicas de la tierra. Si comparará uno entre sí las varias formas de los vejetales que han vivido en la superficie de la tierra en las diferentes épocas de su formación, reparará asombrado mayores diferencias en la natu- raleza de los que se han sucesivamente desarrollado y que han re- emplazado á los que las revoluciones del globo y los cambios en el estado físico de su superficie y químico de la atmósfera hacian des- aparecer para siempre. Tales diferencias no solamente se observan en las especies, ni tampoco son modificaciones lijeras de los tipos, pero mas veces son tantas que géneros y familias enteras nuevas, pero siempre de una organización mas compleja y mas perfecta por consiguiente, vienen á reemplazar á otras familias muy distintas destruidas enteramente; otras veces sucede que una familia nume- rosa y muy variada se halla reducida á algunas especies que se que- dan, mientras que al contrario otra que estaba señalada solamente por algunos raros individuos se vuelve casi de repente muy nume- rosa y predominante. Lo que se observa de ordinario al pasar de una formación geolójica á la siguiente ; pero al considerar el con- junto de tales transformaciones, se presenta al espíritu del observa- dor el resultado general incontestable de la preponderancia en los tiempos mas remotos de los vejetales criptógamos acrójenos, como los heléchos, licopodiáceos , época que corresponde á los terrenos carboníferos v hasta á los de transición, en ellos se hallan además algunas algas, hipoxilons y hongos, que á nuestro parecer debieron serlos primeros vejetales muy numorosos, pero cuyas huellas no se han quedado por causa de ser demasiado blandos y fáciles de des- composición, ^las luego predominan en la llora fósil los vejetales dicotiledóneos ginmospermos representados por cicádeas y conife- ras únicamente muy numerosos, los cuales corresponden á los ter- renos secundarios. En fin el período cretáceo ó de los terrenos ter- ciarios, que parece la transición entre los vejetales de los terrenos secundarios y los de los terciarios, produjo una flora fósil caracte- rizada por algas, heléchos y monocotiiedóneos que fueron palmeras; los dicotiledóneos fueron representados por cicádeas, coniferas, mi- ricíneas, betulíneas, cupulíferas, salicíneas, aceríneas, juglandeas, etc. En fin, el período terciario contemporáneo de todos los depósi- tos terciarios y que se continua aun con la vejetacion que ahora cu- bre la superficie de la tierra contieiie la flora fósil mas numerosa y mejor caracterizada. Para probar la utilidad incontestable de los vejetales para la existencia de los animales transcribiremos aquí lo que dice sobre lo particular el ilustre catedrático del colejio de naedicina de San Yago de Compostela, en su obra titulada : « Ensayo de An- tropolojía » : Cuando los fllósofos buscaron la causa de la crea- ción, cuando intentaron sorprender el Supremo Hacedor en su objeto, se admiraron al reconocer el prodijioso número de produc- XIV DISCURSO PRELIMINAR. tos orgánicos que. al parecer sin uso determinado, cubre la tierra;. j solo la gran idea de hermosura y de adorno del universo les ha resuelto su difícil problema. Pero el hombre no existiera sin esos seres, sin ese gran número de cuerpos vivos cuyo alto objeto puede sernos desconocido aun en í^^ran parte, sin que por eso lo suponga- mos un juego de la naturaleza ni del acaso, porque siglos hace que eh-a naturaleza j ese acaso nada hacen en medio de los sucesos es- traordinarios de tantos siglos que cuenta la historia del hombre. No se nutriera él de elementos si antes no se les presentase ya elabora- dos y después de haber sufrido la acción poderosa de la vida. A la manera que el hombre de nuestras sociedades no come la carne cru- da y precisa que antes se disponga y se prepare para que su estó- mago la lleve bien y la dijiera mejor, así el reino vejetal y el ani- mal son para el hombre grandes laboratorios en donde los elemen- tos sufren una preparación indispensable y necesaria para que no sean refractónos á la acción del organismo. Así es que los cuerpos himples no son alimentos ni los binarios tampoco, sino los ternarios y los cuaternarios ? Porqué? Estos últimos son por lo común combi- naciones que se han efectuado bajo la acción vital y en cuyos fenó- menos han intervenido ya. Toda combinación elemental debe, pues, haber sido el efecto de la acción orgánica para que pueda ser ali- menticia. Por otra parte el alimento vejetal y animal es capaz de ser asimilado al hombre en el estado en que se halla, es decir, ¿se apropia la planta y el animal para nutrirse la misma albúmina, el mismo mucílago que la tierra ó el alimento contienen ? Todas estas partes son descompuestas en los órganos del hombre, todo se trans- forma, se combinan de nuevo sus elementos, se forma nueva fibrina, nueva jelatina, y estas partes que entraban con el alimento no lle- varon al hombre mas que los elementos necesarios para nuevas ela- boraciones poco acondicionadas y aptas para responder á la acción de la vida. Así es que los que solo comen vejetales tienen por eso huesos, cerebro, músculos, sangre lo mismo que los que comen ani- males que poseen estas partes ; luego si el animal se nutre y saca de los vejetales igual resultado que alimentándose de otros anima- les, es bien claro que lo mismo suministran ambos reinos; ambos dan elementos dispuestos á combinaciones orgánicas, por esta razón dan en último análisis los mismos principios constitutivos ó elemen- tos orgánicos los animales herbívoros que los carnívoros y que el hombre. De aquí inferimos que el alimento debe considerarse como una sustancia que reúne cierto número de elementos combinados bajo la influencia de la organización, porque su gran receptáculo es el universo. El hombre saca el alimento de las plantas ó de los animales her- bívoros, porque los animales carnívoros ya presentan ettos elemen- tos en un estado poco propio para sujetarse á la acción de sus órga- nos ; su inñnencia es penosa para el estómago é intestinos , su decomposicion es rápida al menor obstáculo; la sangre que se pro- duce de su elaboración es escitante y escesivamente vitalizada, to- das las secreciones tienen un olor particular y todo su físico parece demostrar que los elementos tienden á volverse al gran receptáculo UTILIDAD DE LA BOTÁNICA. XV comün de donde salieron. Toma pues, el hombre, el alimento por el intermedio del reino vejetal y de los herbívoros, y al tomar de ellos las partes que los constituyen sólo recibe elementos combinado{5 para combinaciones nuevas? y cuál de estos alimentos es mas propio al hombre, el vejetal ó el animal? El género humano ni es herbívo- ro, ni es carnívoro esclusivamente^ es polífago ú omnívoro. Su or- ganización, las diversas posiciones en que puede hallarse; los dife- rentes climas en que reside, los hábitos que puede adquirir; en fin su carácter, los deberes sociales, todo le constituye un ser que pre- cisaba unir la facultad de conformar sus necesidades á su variable posición sobre el globo, y el sinnúmero de modificaciones que tiene que sufrir bajo mil influencias variadas. Así lo vemos frujívoro en los paises calientes y en medio de una vida simple y natural, car- nívoro inmediato á los polos, polífago en los paises templados, her- bívoro en las frescas campiñas, voraz y carnívoro á las orillas de los mares; alimentándose de cereales los de ocupación agrícola, de se- millas y de animales herbívoros cuando pastores, de las fieras indo- mables en medio de las cazas, de peces cuando pescadores, y reu- niendo todas las producciones del globo en sus espléndidos banque- tes para ostentar su soberbia opulencia. Pero no impunemente desoye los gritos de la simplicidad ; el castigo le amenaza cuando mas se estiende su poder para gozar, porque detras de los grandes placeres están los grandes dolores. » ¿ Habrá quizás uno quien ignorará cuan dulces é inapreciables goces saca el aficionado al estudio de las plantas, y cuan mayor uti- lidad le reporta su aplicación diaria? En demasía es sabido de todos cuan hermosos colores saca de los vejetales el arte de teñir; cuántos remedios enérjicos y muy poco costosos las plantas suministran al arte de curar; para todos es demasiado notorio que el agricultor laborioso é inteligente saca de los vejetales mas abundantes, mas variadas y mas ricas cosechas, que se vuelven para su familia un manantial inagotable de goces inocentes y de riqueza, á la par que reporta utilidad á la sociedad entera, cuyo comercio activa; ¿quién no habrá visto al horticultor instruido sacar de sus huertas las mas sabrosas y mas variadas hortalizas, los frutos mas deliciosos y las mas primorosas flores, que le dejan mucho provecho? ¿No son los vejetales que suministran al comercio sus mas abundantes produc- tos y hacen la riqueza de los paises que se dedican sea á su cultura, sea á la fabricación y á la aplicación de sus varios productos? En fin, ¿qué sucedería á esa asombrosa 'diversidad de animales ó de se- res vivientes que hormiguean á la superficie del globo terrestre y que sirven sea directa ó indirectamente al bien estar y al sustento del rey de la creación, si todos los vejetalesdesaparecieran de repente? La botánica, como lo tenemos ya dicho, no solo reporta pro- vecho y utilidad á los que la cultivan y á los paises cuyas artes favorece muchísimo, sino que puede además suministrar datos his- tóricos á sus aficionados ; en efecto, por su medio f^e puede saber aproximadamente cuanto tiempo hace que un edificio e^tá arrui- nado atendiendo á los vejetales que ya cubren sus ruinas. Los edifi- cios abandonados y arruinados tardan poco tiempo en cubrirse de XTI DISCURSO PRELIMINAR. Yejetacion como nadie lo ignora; lo que primero ^e presenta son los liqúenes, sencillas manchas que cubren las piedras por acá y por acullá, al descomponerse forman una capa terrosa muy delgada en que los musgos pueden fácilmente introducir sus raices filamento- sas, y entonces una alfombrita verde y á veces rojiza reviste la ma- yor parte del edificio. Esos musgos se pudren á su vez y dejan en pos de sí un mantillo que basta para que broten algunas plantas herbá- ceas anuales, y se van sucediendo así los vejetales los unos á los otros hasta que aparezcan los árboles, lo que sucede como á los 15 ó 20 años después de la destrucción del edificio. Esos árboles forman, por decirlo así, como una cronolojía viva en que se leen los años del edifi^cio arruinado, porque esta ciencia nos enseña y nos demuestra con la mayor claridad que los árboles forman cada año una capa nueva de madera; eso puesto, si se corta uno de ellos por la parte mas inferior se advertirá en el corte que su tronco se compone de un cierto número de capas concéntricas de madera, correspondiendo cada una de ellas con un año de edad; si el árbol tiene por ejemplo 60 capas, se podrá afirmar que las ruinas no tienen menor edad, y que ei edificio no ha podido estar arruinado ó abandonado en una época mas reciente ; pero como los árboles no han aparecido sino á los 20 ó 30 años de arruinado, se puede calcular que las ruinas tie- nen á lo menos 80 años de edad. Antes de pasar mas adelante nos parece de mucha utilidad seña- lar aquí la ley de las anal ojias botánicas , tan fecunda en resultados de mayor consideración y por desgracia muy poco conocida, y cuya existencia está hasta enteramente ignorada por la mayor parte de ios agricultores, bien que tenga para ellos mayor interés haciéndo- les partícipes de conocimientos que les reportarían provecho. El es- tudio pues de la botánica es cosa muy útil no solo para los médicos, sino también para todos, porque á favor de las analojías botánicas se adivina á primera vista , si es lícito espresarnos así, como nos ha sucedido á nosotros tantas veces durante nuestros viajes, las pro- piedades de vejetales análogos. Las propiedades médicas de las plantas están pues, por lo regular, en relación con sus formas este- riores ó botánicas; en efecto, la ley de analojía entre las propieda- des y las formas esteriores ha servido de base á los trabajos intere- santes de los médicos que han tratado, como estamos haciendo también hace va mas de 10 años, de sustituir los medicamentos in- QÍjenas á los exóticos. ¿Se hubiera intentado y hasta atrevido en muchos países alimentarse con los tubérculos de los Aros, si no se hubieran conocido de antemano las propiedades nutritivas de la yautia, ocumo ó col de los Caribes, haciendo los ensayos con la de- bida prudencia y cautela,, aconsejadas además por el conocimiento de las propiedades venenosas de muchísimas especies de esa fami- lia? Si se estiende la vista veremos los centros nuevos de civiliza- ción y de colonización que se han formado ó que se van formando cada dia en cualquier lugar del mundo, aprovechar los conocimien- tos de los médicos botánicos; pero pocos lo son, bien que se lo figure así la sociedad, porque tiene el derecho de exijir de ellos tales co- nocimientos, no solamente indispensables al complemento de sus DE LAS ANALOJIAS BOTÁNICAS. XVII estudios médicos, sino también casi de utilidad pública, porque á ellos solos hay que dirijirse cuando se trata de datos científicos, cuya aplicación es necesaria tan pronto á la vida material y agrícola de los pueblos como á sus adelantos futuros. La América, tanto sep- tentrional como meridional, es sin duda alguna la parte del mundo en que la teoría de las analojías botánicas tendrá mas numerosas aplicaciones y por consiguiente será útilísima; en la primera, por- que está situada casi en la misma latitud que Europa, esa analojía será mucho mas pronunciada y casi sobresaliente á primera Aitta, esos países estando poblados casi de los mismos géneros pero con especies diferentes; no será tan simple ni tan patente parala se- gunda, porque difiere tanto de la Europa por su latitud y por su clima como por el aspecto general de su maravillosa vejetacion, de tal manera que las analojías botánicas se hallan mas disfrazadas y que necesitan ya de un ojo bastante práctico y botánico para mani- festarse á primera vista, aunque sean tan numerosas y quizás en mayor número que en ninguna otra parte del mundo. Vemos pues los viajeros célebres lejos de su patria, cansados por larguísimas navegaciones, hallar en una costa estraña y desconocida Tejetales parecidos á los de su pais ó teniendo con ellos analojías botánicas mas ó menos pronunciadas; así fué como el célebre Forster halló una crucifera, el lepidio de hortaliza, en las islas del mar del Sur, y le aprovechó con muy buen éxito contra el escorbuto que acababa con la tripulación de su buque, y Labillardiére, reconociendo una nueva especie de perifollo en su viaje de circumnavigacion al rede- dor del orbe, proporcionó á todos sus compañeros un alimento sano y agradable á la par ; nos ha sucedido lo mismo á nosotros muchísi- mas veces en la aplicación médica de los yejetales intertropicales y tropicales, para reemplazar los sacados de Europa, y siempre con inmejorable efecto. Se ha de aprovecharse también del instinto de los animales her- bívoros para ayudarse en la busca de los vejetales útiles: pero entre los herbívoros hay que hacer dos clases de ellos; en efecto, los unos se alimentan indistintamente de todos los vejetales, mientras los otros están destinados á nutrirse de una sola planta ó de las de una familia única; entre los primeros observaremos no los vejetales. que están buscando, porque seria eso demasiado largo, trabajoso y hasta fastidioso, sino los que desechan, y podremos así notar con la mayor facilidad que, á escepcion de.las plantas que por sus espinas ó dureza se libran de la voracidad destructora de los animales, estos desechan ó codician igualmente todas las especies de un género ó de una familia; así los bueyes dejan intactas todas las labiadas y todas las verónicas; los caballos casi todas las cruciferas ; los bueyes, los caballos, los carneros, los cerdos y las cabras no comen casi nunca las solaneas, mientras que con avidez devoran las gramíneas, las leguminosas, las compuestas, etc.; los animales limitados natural- mente á un solo alimento estienden solamente sus estragos á espe- cies del mismo género ó de las mismas familias. Los insectos espe- cialmente pudieran presentar mil ejemplos de ese instinto, así vemos el curculio scrofidaricp, el cinips rosee, lapsíUa junconcm, el TOilO I 2 XVIII DISCURSO PRELniINAFv. curculio rumicis, el cinips salicis, etc., atacar varias especies de los géneros de que toman su nombre, y algunos de entre ellos viven in- distintamente en todos ; si vamos mas lejos encontraremos algunos insectos cuyo instinto les hace traspasar los límites del género ; así todos han observado en el mediodía de Europa que en los bosques las cantáridas atacan primero á los fresnos; después de haber aca- bado con sus hojas se arrojan sobre los lilas y alheñas, que destro- zan, y en fin llevan sus estragos hasta los olivos, únicos géneros de la familia de las jazmíneas que se cultivan generalmente en mayor escala. En todos estos ejemplos parece decírnosla naturaleza misma que los jugos de las especies conjeneres gozan propiedades análogas y que debemos aprovecharlas siempre, como un aviso benévolo que nos ha regalado. Los mismos fenómenos que acaban de presentar- nos los animales y los insectos, nos les ofrece también la liistoria ó estudio de los vejetales parásitos : entre los parásitos lejítimos he- mos de distinguir los que viven indistintamente sobre un gran nú- mero de vejetales, como el muérdago y sus hermanos intertropica- les ; los hongos parásitos están en la segunda clase y nos ofrecen mas notables ejemplos, pero no los que viven en los troncos muer- tos ó en la corteza de los árboles, sino los uredos, los oecidios, las puccinias que nacen bajo la epidermis, se alimentan del jugo de las plantas y están casi siempre limitados á una especie, si bien cuando les falta el alimento pasan de una especie á la otra y aun de un gé- nero á otro como si conocieran la clasificación natural. Cuando se habrá pues reconocido en un género una propiedad bien marcada se la encontrará siempre y seguramente, pero en grado mas ó menos pronunciado en todos los demás géneros de la misma familia, si es muy natural, ó al menos en los de la misma tribu ó grupo; casi todas las cruciferas se pueden reemplazar las unas con las otras; todo el género casia, así como todos los géneros de la tribu de las ca- sieas, tienen propiedades purgantes, etc.; la anal ojia es algunas ve- ces tan pronunciada que la familia entera participa de la misma virtud ; todas las gramíneas por ejemplo tienen semillas harinosas y nutritivas y los tallos llenos de una savia mas ó menos azucarada; todas las labiadas son estomacales, cordiales y tónicas; todas las umbelíferas tienen semillas tónicas y estimulantes; el jugo de las coniferas es resinoso, así como el de muchas terebentináceas ; Ja corteza de las amentáceas es astrinjente y con bastante frecuencia febrífuga, etc.; además añadiremos á tales ejemplos que la lectura comparativa de los relatos de los viajeros prueba que las plantas del mismo género 6 de la misma familia han sido, quizás por casua- lidad ó por una especie de intuición natural, empleadas en iguales usos por pueblos muy distantes los unos de los otros }■ que nunca se hablan comunicado entre sí ; así vemos las raices de la dracena ter- miiialis usadas en las indias orientales por sudorífico, lo mismo que las de la zarzaparHlla, smilax salsaparüla y demás especies del mismo género en ia América meridional ; la corteza del rhizoi^liora gymnorrliiza sirve en las Indias orientales para teñir de negro y para el curtido, como en las Antillas la del rliizopJiora mangle, mienti^as los habitautes del Chile hacen igual uso de la de la lo7ii- DE LA NUTRICIÓN EN LOS VEJETA LES. XIX cera corymhosa, la eugenm malacensis 6 manzana de malaca y varias mirtáceas se usan en el Perú contra la disentería, mientras que en las Antillas se echa mano, para cumplir iguales indicaciones tera- péuticas, de los psidios ó guayabos y otras mirtáceas ; los convólvu- los ó alboholes de las cinco partes del mundo tienen propiedades purgantes, y muchísimos pueblos les utilizan en tal concepto y cor- responden siempre á lo que se está esperando de su administra- ción. No se debe omitir sin embargo, en medio de esa multitud de he- chos que tienden todos á confirmar la teoría, los que presentan al- gunas escepciones notables: ¿quién ignora, en efecto, que la peli- grosa y venenosa cicuta se encuentra al lado de la útil y sabrosa zanahoria, pero en dos tribus distintas; que la dulce batata está junto á la acre y purgante jalapa ; que la amarguísima coloquíntida quiere engañar la vista por su semejanza con cierta clase de melón ; que la venenosa cizaña se cria junto con los trigos, las cebadas y otras gramíneas útiles, y que el árbol mas próximo al ceroso pro- duce uno de los venenos mas activos del reino vejetal, el ácido prú- sico? pero el laurel cerezo tiene esa propiedad, solamente mucho mas desarrollada que las demás especies del género cerezo y de los demás géneros de la misma tribu ; en efecto, escusado es decir que todos los cerezos, ciruelos, albaricoqueros y melocotoneros, etc., lo tienen también en sus huesos, ñores v con frecuencia hasta en sus hojas y semillas. En fin la alimenticia papa se encuentra entre ve- nenos y hasta su tallo lo es. Observaciones debidas al perfecciona- miento de la ciencia contribuirán ciertamente en lo sucesivo á dis- minuir el número de escepciones conocidas, y se puede ya notar en muchos casos que las plantas que se distinguen del grupo tipo por sus propiedades se diferencian también de él por algún carácter bo- tánico mas ó menos importante y algunas veces hasta por su estruc- tura, de manera que muchas han sido ya separadas de las familias en que se hallaban para formar familias nuevas. El terreno en que crecen y vejetan las plantas influye m^uchísimo en su composición química y por consiguiente en sus propiedades, especialmente cuan- do es muy húmedo ó seco ; el período de la vejetacion influye tam- bién mucho sobre la naturaleza délos principios constitutivos de los vejetales. Aquí asentaremos consideraciones generales sobre la nutrición y demás funciones desempeñadas por los vejetales y también sobre el sinnúmero de metamorfosis que el corto número de elementos que les forman han de esperimentar durante el acto de la vejetacion para producir el sinnúmero de principios inmediatos que la química ha conseguido estraer de ellos y el número mucho mayor todavía que no ha podido aislar hasta ahora. La facultad que tienen pues tales cuerpos elementales para solos formar tan numerosas combinaciones ó compuestos particulares que se producen sin cesar al favor de la vejetacion, ne es sino la aflnidad química modificada por la fuerza vital, la cual impide que obedezcan á la tendencia que les solicita á unirse entre sí y les hace resistir á la atracción continua que bajo otras circunstancias ó condiciones XX DISCURSO PRELIMINAR. les llevaría los unos hacia los otros. Tal fuerza enteramente desco- nocida en su esencia se manifiesta continuamente por sus efectos. Si por casualidad y casi de repente cesaran ó desaparecieran las condiciones indispensables á la existencia de tales combinaciones, por causa de apagarse poco á poco la vida vejeta], sin embargo la ma^^or parte de las moléculas orgánicas se quedarían con su propia forma y con su naturaleza química, únicamente á causa de la iner- cia, propiedad inherente á la materia. En tal estado de causas el solo contacto del aire, la mas débil é insignificante acción química, á veces la sola presencia de otro cuerpo cuyas moléculas están ya en movimiento y esperimentando ya un principio de descomposición ó de fermentación, bastará para alterar ó para destruir el equilibrio; entonces saliendo de su inercia sus elementos se agrupan de otro modo, entran en nuevas combinaciones mas simples y todas mine- rales é inorgánicas en la formación de las cuales predomina la fuer- za química sola, de la misma manera que cada dia lo presenciamos en nuestros laboratorios de química. ¿Quién ignora que un solo mo- vimiento mecánico, un simple roce ó un golpecito, por. débil que sea, basta para destruir el equilibrio de los elementos que forman cierta clase de cuerpos ó compuestos químicos, el fulminato de mer- curio y de plata, el ioduro de ázoe, el fulmicotón verbigracia? La electricidad, la luz y el calórico tienen poder para modificar conti- nuamente y á cada instante los resultados de la afinidad química, además es sabido perfectamente de todos los que se han dedicado un tanto al estudio de la química, que la atracción recíproca de los cuerpos está sometida á un sinnúmero de causas que siempre están prontas para hacer cambiar su estado tanto físico como químico y para modificar mas ó menos la tendencia recíproca de sus varios elementos. De igual manera la fuerza vital influye en estremo sobre la manifestación de las fuerzas químicas obrando en medio de los actos de la economía viviente tan pronto vejetal como animal. La fuerza vital pues tan misteriosa y tan poco conocida en sí reparte su poder con las fuerzas químicas que mete en movimiento y que mo- difica á la par, para que se puedan verificar cuantas maravillosas y numerosas metamorfosis durante las cuales, la materia, cual nuevo Proteo, se va agrupándose, dedoblándose y volviéndose de mil ma- neras diferentes y sucesivas para formar el sinnúmero de productos vejetales que existen y también á la vez y acto continuo para hacer desarrollarse los varios órganos que necesitan esos seres para vivir. En efecto durante todo el tiempo que sigue la vejetacion se van verificándose sin cesar, entre los elementos de las combinaciones orgánicas ya existentes en los vejetales, movimientos moleculares, de que resultan metamorfosis, cuya consecuencia necesaria es la formación de secreciones, tan pronto gaseosas, que se derraman en la atmósfera al salir de las hojas, flores y demás partes verdes, co- mo sólidas ó líquidas, que después de filtradas á través de la corteza se recejen, con forma de goma, de resina, de sustancias azucaradas, etc. Al mismo tiempo otras sustancias liquidas solubles están elimi- nadas por las raices y son mas abundantes en la estación de la flora- ción que durante la fructificación ; esas escreciones radicales se ob- DE LA NUTRICIÓN EN LOS VEJETA.LES. XXL servan casi en todos los vejetales y consisten en productos orgánicos muj ricos en carbono, que se quedan en el suelo, enteramente in- útiles parala nutrición ulterior de las plantas que les han producido, pero que están en depósito en la tierra para después de podridas ser- vir de abono para los vejetales venideros, lo que estamos presen- ciando diariamente, sin saberlo, en las praderas ó pastos naturales llamados savanas ó pampas, v también en los montes y selvas en donde las hojas, ramas muertas y caldas al suelo, pudriéndose, for- man sin cesar humus que cada dia hace el terreno mas rico en car- bono, de tal suerte, que en tales lugares vemos la vejetacion seguir tan lozana y tan vigorosa durante siglos enteros, como estuvo en los primeros años de su creación, lo que llena al observador de relijioso asombro y de admiración para con la divina sabiduría. De lo dicho resulta evidentemente que, en el estado normal de la vejetacion, las plantas no agotan ni empobrecen tampoco la riqueza del suelo, pero lo vuelven al contrario mas apto para otra generación vejetal diferente venidera, porque restituyen á la tierra mayor cantidad de carbono en general que la que hablan sacado de él; en efecto, en la atmósfera sola chupan todo el ácido carbónico que ha de proporcio- narles el carbono que necesitan para el aumento de su masa total; pero sin embargo, á pesar de eso, para que los vejetales produzcan tanto cuanto pueden, es preciso cambiar las especies y hasta las fa- milias cada año ó lo mas frecuentemente posible en el mismo suelo, porque las secreciones de las unas son abono para las otras, mien- tras que sin esa precaución, indispensable en Europa y en los terre- nos entregados al cultivo hace siglos y por esa razón empobrecidos, que necesitan estercolarse, vejetarian raquíticos y no darian uti- lidad. Los órganos de los vejetales no cesan de funcionar un solo ins- tante en el estado normal de la vejetacion; en efecto, las raices y demás partes que han de desempeñar las funciones de la nutrición absorben sin cesar agua y chupan sin interrupción alguna ácido carbónico ; esa propiedad orgánica de esos órganos es enteramente independiente de la acción de la luz del sol, de tal manera que du- rante el discurso del dia tan pronto á la claridad como á la sombra el ácido carbónico se va acumulando v concentrándose en ellas, lo que sigue también de noche, pero cuando los rayos directos ó difu- sos del sol vienen á tocar las hojas ó demás partes verdes, entonces y acto continuo el ácido carbónico está descompuesto, como si estu- viera sometido á la acción de la mas poderosa pila eléctrica, y prin- cipia á verificarse la solidificación y asimilación del carbono al es- tado naciente y vuelto libre que entra en la organización vejetal que alimenta; la mayor parte del oxíjeno así puesto en libertad se va derramándose sin cesar en la atmósfera cuyas pérdidas continuas remedia. En los paises intertropicales, en donde estamos escribiendo estos renglones, en los tro[iicalesy en general en todas las comarcas cálidas, en donde las nubes no detienen sino muy raras veces los ra- yos del sol, cual lluvia abrasadora y á la par fecundadora caen di- rectos sobre los vejetales, cuya maravillosísima vejetacion activan en sumo grado, están los manantiales inagotables y eternos deloxí- XXII - DISCURSO PRELIMINAR. jeno del orbe entero, mientras que en las zonas templadas y en los países fríos, en donde un cíelo nebuloso poniendo casi constante obíítácnlo á la acción de los rajaos solares se produce ácido carbónico en mayor abundancia. Eso puesto se puede sin ningún inconve- niente admitir que la misma corriente de aire que, por medio de la rotación continua de la tierra, se ya estendíéndo desde el ecuador hasta los polos, lleva consigo á Europa y otros países del norte el oxíjeno producido en la zona tórrida, mientras que al favor de otro movimiento retrógrado, igual corriente lleva á los países c:ilídüs el ácido carbónico acumulado durante los inviernos. De los trabajos físicos del célebre Teodoro de Saussure sale que las capas superiores de la atmósfera son siempre mas ricas en ácido carbónico que las inferiores, porque estas últimas están en continuo contacto con los vejetales, que lo chupan sin cesar, y ade- más su proporción es mayor de noche que de dia, por la razón que en este último caso hay mayor absorción de oxíjeno, y aunque las descomposiciones siguen sin cesar, las reacciones son mas lentas y por otra parte todo el oxíjeno se queda acumulado en el vejetal, hasta que salga una parte bajo la influencia de la luz. Los vejetales purifican pues el aire de la atmósfera, absorvíendo sin cesar ácido carbónico j derramando casi sin interrupción oxíjeno en ella para reemplazar al que está consumido por los animales. Con el movi- miento horizontal de la atmósfera se nos viene tanto oxíjeno como se nos va de ese cuerpo: por otra parte las corrientes de aire, efecto de lá variación de temperatura, aunque muy útiles, son poca cosa en comparación de los trastornos atmosféricos producidos por los vientos, que, mezclando las varias capas que forman la atmósfera, mantienen así el equilibrio de su composición y lo hacen siempre pro- pío para la respiración. Sabido es perfectamente de los mas incultos, como de los mas sa- bios, que la cultura mejora muchísimo el estado sanitario de los paí- ses, como lo tiene probado la observación diaria de los hechos, y sin el cultivo se verían, como ya se ha observado demasiadas veces, las mas ricas y mas saludables comarcas volverse pronto pernicio- sas é inhabitables. Por otra parte, sin el concurso activo, continuo y benéfico de los vejetales, la espantosa cantidad de ácido carbó- nico derramada diariamente en la atmósfera, y por consiguiente en la superficie de la tierra, y que proviene tan pronto de la respira- ción del sinnúmero de seres vivientes que la pueblan, de la combus- tión y de las artes químicas, como de la descomposición pútrida de los cuerpos organizados murtos, porque sea el reino á que perte- nezcan, y además la proporción incalculable do ese cuerpo que sale sin cesar de las entrañas de la tierra, no tardaría en viciar la at- mósfera de tal manera, que el aire ya no serviría para la respira- ción, y en lugar de dar la vida, se habría vuelto veneno y daría la muerte. Cuando falta á los vejetales la influencia de la luz, entonces el ácido carbónico absorvido no está descompuesto, y por esa causa otra acción química principia al favor de la influencia del oxíjeno IsObre las hojas, flores y frutos; pero tal reacción, puramente quí- DE LA KUTRICION EN LOS VE JÉTALES. XXIII mica, no tiene nada que ver con la vida de las plantas, porque se presenta de la misma manera en los vejetales después de muertos; en efecto, si pudiéramos conocer de antemano y previamente la composición química de varias plantas, nos seria fácil señalar á priori y con acierto cuales de entre ellas han de absorver mas can- tidad de oxíjeno durante su vida j en la oscuridad. Por medio de esperimentos bien hechos se sabe, en efecto, que las hojas y demás partes verdes que contienen esencia ó principios aromáticos voláti- les, que con el oxíjeno pueden volverse materias resinosas ó pare- cidas á las resinas, absorven mucha mayor proporción de oxíjeno que las que no tienen esa composición química; se sabe también que los vejetales cuya savia es muy rica en tanino ó en sustancias azoa- das, chupan mucho mas oxíjeno que los que no contienen esos prin- cipios orgánicos. Los vejetales al descomponer el agua absorvida sea por sus raices, sea por sus hojas, asimilan el hidrójeno que se or- ganiza y entra en la formación de la partícula orgánica, mientras que al mismo tiempo se derrama en la atmósfera una proporción correspondiente de oxíjeno. En la producción del leñoso, del almi- dón, goma, azúcar, etc., cuya composición elemental consiste en carbono y en los elementos del agua, oxíjeno é hidrójeno, las plan- tas echan siempre en la atmósfera el oxíjeno que resulta de la des- composición del ácido carbónico, cuyo carbono se junta al estado naciente ó molecular con los elementos del agua, que sin duda están en igual circunstancia, y la molécula orgánica ya ha nacido, y se- gún el modo con que se agrupa con las otras que sucesiva é ince- santemente se forman, produce una de las sustancias señaladas. En la formación de la cera, de los aceites íijos y volátiles, del caucho y demás principios orgánicos hidrocarbonados, los vejetales tienen la propiedad de descomponer el agua de tal manera, que su hidró- jeno se organice, y reunido con el carbono 3^ los elementos del agaa, sin duda agrupados de otra manera que en ese líquido, forme los cuerpos orgánicos mencionados. El amoniaco, que se halla casi en todas las aguas, en los terrenos, en los Obtiércoles, proviniendo "áe la descomposición de las sustancias orgánicas, que se forma sin cesar en la superficie de la tierra y en la atmósfera bajo la influen- cia electro-química, suministra á los vejetales todo el ázoe necesa- rio para la formación de los principios azoados y quizás también una parte del hidrójeno que entra en la composición de la albúmina, fibrina, caseína, de las materias rojas y azules, de los álcalis v(^je- tales, etc. Al examinar y estudiar con el debido cuidado los órganos de los vejetales, se observará que cada fibra del leñoso está en- vuelta con savia, conteniendo siempre alguna sustancia azoada, que los granitos de almidón ó fécula y el azúcar mismo están deposita- dos en celdillas que contienen en su composición una cierta canti- dad de sustancia azoada, en fin, que el suco sacado por espresion de todas las flores contiene siempre sustancias azoadas, junto con otras, que de lo dicho y de trabajos científicos hechos con todo el cuidado deseable, resulta que el ázoe tiene en el organismo vejetal un papel tan importante, que sin la presencia de ciertos principios azoados orgánicos, la mayor parte de los fenómenos de la vida ve- XXIV DISCURSO PRELIMINAR. jetal no podrían verificarse; en efecto, el leñoso no se puede elabo- rar en las hojas al estado perfecto, pero estos órganos tienen poder para elaborar j preparar sustancias orgánicas especiales capaces, después de haber esperimentado varias metamorfosis sucesivas, ca- minando por el vejetal, junto con sustancias azoadas, de volverse leño ; será quizás mu}^ probable que el leñoso y la gliadina, el almi- dón j el tejido celular se vayan organizando simultáneamente y al lado los unos de los otros, ya que no se diferencian sino por el agru- pamiento diferente de las moléculas orgánicas, su composición quí- mica siendo idéntica, y en tal caso una proporción definida de cada uno de ellos será condición esencial para su formación recíproca. Por otra parte, todas circunstancias siendo iguales , las sustancias orgánicas formadas por las hojas no podrán estar asimiladas sino en proporción ó en relación con la cantidad de ázoe que se encuentra con ella; pero, si por casualidad faltase ese cuerpo, cierta cantidad de sustancia no azoada formada se quedaría entonces sin empleo alguno y estaría eliminada tan pronto por las hojas y las raices, como por la corteza, etc. ; á esta clase de fenómenos, sin duda nor- males en la vida de ciertos vejetales, se han de atribuir las exuda- ciones de maná, de azúcar, de goma, de resina, etc., que diaria- mente se observan, y además corresponden quizás con ese orden de fenómenos los depósi>tos de fécula que se forman tan pronto en las raices y tubérculos, como en los troncos y semillas. Tales fenóme- nos parecen tener bastante analojía con lo que pasa en la dijeccion considerada en los animales mamíferos; en efecto, para restituirá cada parte del cuerpo lo que está perdiendo sin cesar por medio de las secreciones continuas, es preciso proporcionar á los órganos di- jestivos alimentos formados á la par de sustancias azoadas y no azoa- das, y cuando todas las pérdidas orgánicas están remediadas, las sustancias no azoadas sobrantes, no encontrando empleo se deposi- tan con forma de grasa; otras veces están eliminadas por el canal intestinal v botadas iunto con los escrementos. La producción anómala de algunos principios vejetales hace su- poner con razón en las hojas una fuerza asimilatriz mayor que cual- quier acción química por poderosa que sea; en efecto, para formarse de ella una idea, por supuesto bien incompleta, es preciso tener presente que tal fuerza tiene mucho mayor poder que la batería eléctrica mas poderosa, porque con ese aparato cuesta mucho tra- bajo descomponer el ácido carbónico, fenómeno que se verifica sin cesar y con ma^'or facilidad en las hojas, no solamente vivas y ha- ciendo parte del vejetal, sino también en las que están separadas de él. Jas cuales siguen sin embargo, bajo la influencia de la luz solar á descomponer el ácido carbónico que tenían absorvido ; en ese caso no son para nosotros sino un aparato electro-galvánico muy pode- roso, puesto en acción por la luz del sol; todos los trabajos científi- cos publicados por muchos físicos y botánicos célebres demuestran con mayor evidencia que las hojas verdes, aunque separadas del vejetal y colocadas en agua cargada de ácido carbónico, el aparato espuesto á la acción de los rayos solares, la descomposición princi- pia inmediatamente y sigue hasta que todo el ácido carbónico haya DE LOS PEINCIPIOS VEJETALES ANÓMALOS. XXY desaparecido del líquido, el oxíjeiio se recoje en una campana de vidrio dispuesta á propósito, mientras que el carbono se queda en ellas: lo que comprueba nuestro parecer. Para cumplir pues con una de sus principales funciones, las hojas no necesitan del concurso del ázoe, cuja presencia parece al contrario necesaria, con forma de alguna sustancia azoada, para que se verifique la asimilación de los nuevos productos resultando de esa descomposición. El carbono pues del ácido carbónico así descompuesto por las hojas j organi- zado, se vuelve líquido ó soluble j está propio entonces para que la savia en su circulación continua se le lleve consigo á todas las par- tes del vejetal que se le asimilan, según sus necesidades, y entonces se forman el leño, el azúcar, las gomas, féculas y demás productos orgánicos y también los órganos. En las hojas pues la savia ascendente se vuelve nutritiva, y des- pués desciende, principalmente por la corteza y también por el cuerpo leño, si bien en menos cantidad y en casos mas raros ; tal materia no está, y no puede estarlo tampoco, organizada , ya en fir- bras ó en celdillas del tejido celular, sino que contribuye á su for- mación local: su composición química ha de ser análoga á la de la sroma: en efecto, en la corteza v en la albura de los vejetalcs v^ascu- lares hay una gran facilidad para producir esta sustancia. Se depo- sitan pues á propósito en diferentes puntos interiores ó esteriores de los vejetales mas materiales, com^o la fécula, el azúcar, la liñina, que teniendo igual composición química se transforman en ella por medio de metamorfosis muy sencillas y sin duda para nosotros tam- bién vice-versa. El célebre de Candolle dice que la goma es el jugo nutritivo descendiente, pero que para obrar convenientemente en la nutrición, debe trasformarse en fécula, en azúcar, en liñina y otros productos enteramente análogos , que han de permanecer algún tiempo almacenados ó depositados en ciertos órganos, y después trasformarse y disolverse de nucA'o para entonces servir directamente á la nutrición. Esa disolución se verifica con frecuencia al pasar la savia ascendente por esos depósitos: de ese modo se esplicacon ma- yor facilidad la'vejetacion tan activa de la primavera, el desarrollo casi espontáneo de las yemas, la nutrición de las ñores y de las fru- tas, la prolongación rápida de los tallos florales y la vida de las plantas jóvenes. En todos esos casos la savia ascendente se carga de materia gomosa, acumulada anteriormente en los órganos situados debajo ó al lado de los que crecen ;^1 líquido viscoso de donde pro- ceden las nuevas capas de leñoso y de corteza, es una mezcla de am- bas savias, que constituye el cambium de unos autores de botánica. Kinght ha probado tal mezcla examinando el peso específico de la savia ascendente á diferentes alturas, y ha observado que se va cargando de moléculas nutritivas al subir por el tronco de los ár- boles; supone además que una parte de ella se dirije horizontal- mente por los radios medulares y va á contribuir á la formación de las capas nuevas. Por la misma razón las plantas pueden vivir algún tiempo sin elaborar alimento alguno, entonces su vida sigue á es- pensas suyas y acaban por e.Ntenuarse; lo mismo sucede diaria- mente á los anim.ales puestos adieta severa y que viven algunos XXVI DISCURSO PRELIMINAR. dias de su gordura y se van enflaqueciendo á medida que se va pro- longando, liasta que por fin se mueren estenuados. Si las plantas bulbosas j carnosas viven mucho mas tiempo en tal estado, es por- que tienen un depósito de materia alimenticia mucho mas surtido que las demás. Las hojas no se producen, ni se pueden presentar tampoco, sin que antes el alimento que han de necesitar haya sido almacenado de antemano; es preciso pues que siempre otras hojas les hayan precedido en su desarrollo, sea el mismo año, sea el an- terior. Las especies perennes producen cada verano lo que han de necesitar para la florescencia del año siguiente, mientras que las anuales, al contrario, se mueren estenuadas después de haber dado su fruto ; pero en la primera categoría de plantas las flores pueden en la primavera desarrollarse antes de las hojas, porque hay alimento depositado á propósito y de antemano, mientras al contrario las plantas anuales, no teniendo sustancia alimenticia guardada, no pueden florecer antes que las liojas la hayan preparado. De todo lo diclio sobresale con mayor evidencia que, según la proporción de sustancia nutritiva suministrada simultáneamente á una planta, se puede variar mucho la cantidad y la naturaleza de los productos de su vejetacion. Hay en la ciencia razones suficientes para admitir sin inconve- niente ninguno que los aceites esenciales cuyo oxíjeno está reem- plazado por azufre, provienen de la metamorfosis que tuvo lugar entre los elementos de los principios orgánicos azufrados y de su na- turaleza poco conocida hasta ahora; en efecto, algunos cuerpos azu- frados, como la albúmina, febrina, caseína y emulsina, se hallan en todos los vejetales. Aunque de todo lo que acabamos de referir sobresalga que el ácido carbónico, el agua y el amoniaco sean cuerpos indispensables para la vida de los vejetales, porque tales cuerpos inorgánicos contienen los elementos, no solamente de sus órganos, sino también de los productos que han de elaborar después, sin embargo no bastan, y se necesita además la presencia de otras sustancias minerales para que se pueda efectuar el desarrollo normal de ciertos órganos veje- tales; tales sustancias son el ácido silícico, los óxidos de verro v de manganeso, la potasa, la sosa, la cal y la magnesia, y por fin los fosfatos, sulfates y cloruros de cal, potasa y sosa, que los vejetales sacan del suelo por medio de sus raices. Los álcalis están siempre en los vejetales al estado de sales orgánicas, que serán tan pronto tartratos, malatosy oxalatos, como acetatos, quinatos, citratos, etc., según la clase de vejetal que se estudia, las cuales son indispensa- bles para su normal y completa vejetacion. Por otra parte se sabe muj'^bien que los alcaloideos están siempre en los vejetales en pro- porción inversa de la de los álcalis minerales, cuya mayor cantidad escluye siempre su presencia y vice-versa. Todos los órganos de las plantas, tanto las hojas, nodrizas natu- rales y necesarias de la madera ó leño, como las raices que han de proporcionar lo necesario para el primer desarrollo de dichas hojas y que además elaboran los principios que han de servir para la for- mación de los frutos, contienen sin escepcion alguna sustancias DE LAS PLA>;TAS anuales y VIVACES. XXVII azoadas cuya proporción varia muchísimo; las raices y los frutos son niuclio mas ricos en tales sustancias que las demás partes de los vejetales y son por esa razón mucho mas alimenticios para los animales. La atmósfera sola suministrará pues todo el ázoe pri- mitivo que para su normal desarrollo puedan necesitar las plantas, y se le apropian solamente después de haberse vuelto amoniaco, cuyos elem.entos sufren, cual los del agua y del ácido carbónico, en la economía vejetal, bajóla influencia poderosa de la fuerza vital, un sinnúmero de metamorfosis. El desarrollo de los vejetales es teni- do por normal 6 completo solamente cuando han parido semillas per- fectas ó capaces de propagar la especie : pero si cada vejetal no pro- dujera sino uno ó algunos frutos y semillas, en número nada mas que suficiente para la conservación de la especie en la superficie de la tierra, no cumplirla enteramente con el sabio objeto para que fue- ron criados; en efecto, el Supremo Hacedor no ha formado el sin- número de vejetales que se hallan en la superficie del orbe sino para servir sea directa, sea indirectamente á la alimentación de los ani- males, y con una disposición llena de saljiduría les ha dotado de la maravillosa propiedad de volver el ázoe de la atmósfera sustancias organizadas azoadas apropiadas á la constitución de los animales que habian de sustentarse; esas sustancias son la fibrina, albúmina y caseína vejetal, cuya composición química elemental es idéntica á la de las mismas sustancias contenidas en los animales, solamente difieren las unas de las otras, á nuestro corto parecer, por su agru- pamiento molecular diferente. Las plantas anuales, después de cumplido el desarrolló completo de sus frutos, cesan de vejetar, sus ramas se vuelven ala'o leñosas, se amarillentan v marchitan sus lio- jas que no tardan en morir, mientras que los vejetales vivaces, al contrario, cuales los arbustos v árboles llesrados á isrual período de su vida y aunque paridos sus frutos no se mueren, porque se esta- blece desde luego en su interior una nueva vejetacion oculta, pues que no se manifiesta de ninguna manera esteriormente, y sin em- bargo sigue así á escondidas hasta el principio del invierno en los paises frios y templados, lo que sucede también en los países cálidos para el corto número de vejetales que se despojan de su follaje sea en correspondiente estación ó en otra: entonces parecen muertos ó descansándose en apariencia, pero no es así ya que su savia está todavía en movimiento vsale abundante por las heridas que reciben. Durante ese aparente descanso ó sueño, las capas leñosas del bronco siguen formándose, se vuelven mas compactas, mas duras las que existian y la madera se va perfeccionando. Desde el raes de agosto en adelante el ácido carbónico absorvido por las hojas ya no sirve para la formación de nuevas capas leñosas: entonces se lo aprove- cha el vejetal para preparar una provisión suficiente de sustancias nutritivas, que se quedan almacenadas para después proporcionar lo necesario al principio de la vejetacion del año venidero ó al des- arrollo de las primeras hojas; en tal caso, en lugar de leñoso se forma almidón, que llevado por la savia de agosto se va depositan- do en todas las partes del vejetal, en donde- se le puede ver con un buen lente de aumento. Entonces á medida que se va manifestando XXVIII DISCURSO PEELIMINAR. la vida por la salida y el desarrollo mas ó menos rápido de los ór- ganos contenidos en las 3^emas, se va también desapareciendo la fé- cula, poco á poco, de los órganos que la tenían guardada, como se observa en las raices j tubérculos que la contenían con abundan- cia, pero que después de salido de su sueño el vejetal para vivir de nuevo, se marchitan ó se ablandan y ya no la contienen mas. ¿Qué mayor prueba se puede desear del papel de ese cuerpo orgánico en el acto de la vejetacion ? Quién no tendrá presente que la caña de' azúcar pierde la mayor parte de su dulce durante la florescencia ó cuando está echando su guajano ó flecha? Las plantas anuales pro- ducen, recejen y tienen también guardados unos principios nutriti- vos para suministrar alimento al individuo naciente, pero con la diferencia que esos principios son á la par sustancias azoadas y no azoadas, mientras que para los vejetales perennes son siempre no azoadas y repartidas por todas sus partes ; los de las ^^erbas al contrario se hallan solamente en las semillas, en donde se quedan depositados hasta que, llegada la estación favorable para la germi- nación, sus elementos, esperimentando entonces las metamorfosis necesarias bajo la influencia vital que tiene sobre ellas el embrión, suministran el alimento necesario para el desarrollo de la radícula y de las hojas primordiales del feto vejetal, para que se vuelva niño vejetal, si así priede espresarse, ya capaz de disfrutar un tanto de su vida propia. Después de la formación de esos primeros órganos indispensables, principia solamente su nutrición, propiamente di- cha, porque cuando el germen empieza á salir del suelo, á reverde- cerse poco á poco desde arriba hacia abajo, entonces solo la plantita principiará á sacar algo de afuera para formar las materias que han de ayudar á su desarrollo y al aumento gradual de su masa. Si el gra- no de trigo en germinación, verbigracia, contuviera solamente almi- dón y gluten, evidente seria entonces que ambos tomarían parte por medio de sus elementos, sufriendo metamorfosis á propósito, con la influencia necesaria del aire, de una temperatura suficiente, de bastante humedad y también de la electricidad, porque cuando en la atmósfera hay movimientos eléctricos insólitos, especialmente acompañados de lluvia, cuya agua está sin duda cargada de electri- cidad ó llevando consigo una cierta proporción de ozona, la germi- nación es mucho mas activa y se pueden casi seguir sus progresos con la vista. El resultado de las reacciones ó metamorfosis que tie- nen lu^ar durante la germinación, en ese caso, consiste en ácido carbónico que se exhala en la atmósfera, un poco de ácido acético y azúcar; entonces el gluten se ha vuelto soluble y ha producido algu- nas sustancias azoadas, quizás óxido de amonio ó alguna otra sus- tancia análoga cuya existencia es hipotética, pero probable, y cuyo papel, por no ser bien conocido, no está menos evidente para nos- otros: los elementos pues de ambas sustancias siguen así esperi- mentando metamorfosis sucesivas hasta que hayan salido las fibras de la radícula y las hojas primordiales; pero si sobrase después de eso una cierta cantidad de uno de ellos, se quedaría entonces sin empleo hasta que se le necesitara, y en tal caso esperimentará las metamóríbsis necesarias para volverse alimenticia ó asimilable. Sa- CORRESPONDENCIA DEL REINO ORGÁNICO E INORGÁNICO. XX4X biclo es perfectamente que durante la germinación de los cereales, como el trigo, cebada, arroz, maiz, etc., la transformación del almi- dón en glucosa se verifica á favor de la inñuencia de la diastasia so- bre él y constituye quizás la primera manifestación físico-química de la vida del nuevo ser ó del feto vejetal. El gluten, la albúmi- na, etc., y demás sustancias azoadas ya señaladas mas arriba pue- den suplir la diastasia en los actos de la germinación, con la sola diferencia que su efecto es un poco mas lento y hace por consiguiente la germinación algo mas tardía ; la diastasia que se halla sobrante en la cebada germinada no se debe tener por inútil, porque sin duda alguna junto con los de la fécula, sus elementos toman parte activa en las metamorfosis que producen el azúcar ó glucosa. En la prima- vera, estación en que las plantas en germinación no tienen todavía órganos que las proporcionan alimento sacado de la atmósfera, las semillas han de suministrarlo, y la plantita recibe en cada fibra ra- dicular en que nace una boca, un pulmón y tin estómago á la vez, si podemos espresar así nuestro parecer; en efecto, las primeras rai- ces han de desempeñar casi en el acto de su nacimiento las funcio- nes de las hojas que faltan todavía, y tienen que suministrar pues á la planta recien nacida lo que chupan en la atmósfera subterránea que las envuelve y que se compone de ácido carbónico proviniendo de la reacción continua sobre el humus del oxíjeno de la atmósfera, cuyo aire contenido en la tierra movediza que penetra sin cesar, y en que se condensa sin interrupción, obedeciendo en eso á la po- rosidad yá la capilaridad, propiedades inherentes á la materia inerte, suministra otro oxíjeno á medida que el ácido carbónico for- mado está absorvido, y se sigue así hasta que tenga órganos sufi- cientes para sacar alimento de la atmósfera; entonces el joven veje- tai se alimenta á la vez y simultáneamente por las raices y por las hojas de tal suerte, que se desarrolla con mayor ó menor prontitud seííun sus óríranos funcionen mas ó menos normalmente. Cuando hayan llegado á su perfecto y completo desarrollo sus órganos, no necesitarán ya mas del ácido carbónico del suelo, ni hasta cierto punto de su humedad, porque sus hojas bastarán para sacar de la atmósfera lo que necesiten, el aire y el rocío suministrarán de or- dinario bastante humedad para que se puedan verificar los actos de la nutrición vejetal. Sabido es que durante los estíos mas cálidos y en los países intertropicales, los vejetales sacan de la atmósfera casi todo lo que necesitan; es notorio en las comarcas de América, en las cuales no llueve nunca, como en* la isla de Margarita verbigracia, que los copiosos rocíos que caen de noche bastan para la vejetacion; pero sin embargo, cuando la estación seca se prolonga en demasía, entonces los vejetales padecen mucho, la vejetacion está parada y sus productos se hallan muy modificados. El ácido carbónico, el amoniaco y el agua son pues las tres sustancias inorgánicas cuyos elementos, después de haber sufrido reacciones químicas y meta- morfosis sucesivas, son capaces de formar la molécula orgánica que constituye el alimento que necesitan los vejetales para su desarrollo normal, mientras el almidón, la glucosa, y la goma, junto con una sustancia azoada cualquiera que sea, pero siempre orgánica, tic- XXX DISCURSO PBELIMINAK. nen igual papel para con el feto vejetal naciente ó ya recien na- cido. El feto de los animales mamíferos que se alimentan de la sangre de su madre no necesita del aire y no esperimenta pues ningún per- juicio por su falta ; pero no es así para con los huevos de las aves, délos reptiles, etc., cuyo germen, como el de las semillas de los yejetales, necesita del oxíjeno del aire y no puede desarrollarse sin su presencia, y se muere ó no germina cuando le hace falta; por esa razón el agua pura hace mas provecho á las plantas recien na- cidas que la cargada de áqido carhónico, lo que es contrario para el vejetal adulto. Reasumiendo pues todo lo dicho, diremos que el reino mineral ó inorgánico es el manantial inagotable con que cuentan los vejetales para proporcionarse el alimento y los elementos necesarios para remediar sus continuas é incesantes necesidades y perdidas. Tene- mos que volver á señalar en primer lugar el ácido carbónico y el amo- niaco déla atmósfera, de los cuales sacan los vejetales todo su car- bono, todo su ázoe, una parte de su oxíjeno y de su hidrójeno, mientras los que necesitan mas oxíjeno é hidrójeno se los propor- ciona el agua, que sin descomponerse entra en su composición, ó bien cuyas moléculas, quedándose en igual proporción atómica, se ac^runan de otra manera ó se organizan sufriendo metamorfosis á propósito, junto con el oxíjeno y el carbono, para formar la partí- cula orgánica, que al agruparse convenientemente, da la celdilla, principio de toda organización vejetal. La atmósfera les suministra también una cierta proporción de oxíjeno. Por otra parte los sul- fates terrosos y alcalinos, obedeciendo á la fuerza vital, se hallan quizás del mismo modo que lo vemos suceder diariamente en nues- tros laboratorios químicos, cuando estas sales, sometidas á la acción de una pila eléctrica, sus dos elementos compuestos se separan de manera que el uno, la base, se va al polo negativo, mientras el otro, el ácido, se encuentra al positivo; las primeras se combinan con los ácidos orgánicos, mientras el ácido sulfúrico, esperimentando mas íntima descomposición, análoga á la del ácido carbónico, suministra azufre, que atestado naciente entra en la composición de la molé- cula orgánica, y de esas metam.órfosis salen ciertas sustancias orgá- nicas ó principios inmediatos especiales, el aceite esencial de mos- taza, por ejemplo, la albúmina, caseína, etc. Además, para la formación de sus órganos, los vejetales necesitan siempre de las sustancias inorgánicas ó minerales ya señaladas mas arriba y tam- bién de sales orgánicas cuyo ácido es muy variado, combinado sea con las bases! norgánicasú orgánicas mencionadas. Un suelo será fértil ó feraz cuando, conteniendo los elementos minerales propios á los ve- jetales, tendrá además poder para condensar el aire de manera que se forme en su seno amoniaco y ácido carbónico, y bastante hume- dad para que los vejetales se desarrollen en él con toda la lozanía deseada y suministren un alimento copioso y perfecto para el sus- tento de los animales. Los vejetales, tan indispensables ala vida de los demás seres vivientes, son pues los productos últimos y constan- tes de la descomposición pútrida de todos los cuerpos organizados DE LA PROPAGACIU>, DE LOS VEJETALES. XXXI muertos y perteneciendo á las generaciones anteriores. Todos los productos, sin escepcion ninguna, tan variados y tan numerosos de ia fuerza vital, después de muertos los seres que les contenían se vuelven á sus primitivas formas ó se trasforman en ácido carbónico, hidrójeno carbonado, amoniaco, agua ven liumus ó residuo orgá- nico, cuja transformación es lentísima. La muerte, disolución ó descomposición completa de una generación, se vuelve pues el ma- nantial inagotable de donde han de salir las generaciones futuras; déla muerte de los unos sale pues necesariamente la vida délos otros. Con miras tan sublimes como sabias, la vida de las plantas jla de los animales son enteramente enlazadas ia una con la otra por medios tan sencillos como duraderos j que asombran. Se puede muy bien figurar una vejetacion abundante y lozana sin el concurso ni la presencia de ningún individuo del reino animal, mientras al contra- rio no puede ser así de los animales, cuya existencia depende nece- saria y esencialmente de la presencia y del desarrollo normal de los vejetales, sin los cuales no podrían encontrar alimento alguno. xiunque la fecundidad de las plantas sea frecuentemente asombrosa : en efecto Lineo ha visto una mata de tabaco producir 40,320 semillas y una adormidera 32,000, etc., y que la naturaleza tan proveedora no haya puesto límites á tan enorme multiplicación de los vejetales, su número es sin embargo casi siempre igual, porque una porción bastante limitada de las semillas sirve para la conservación de las especies, mientras otra se utiliza parala alimentación de los anima- les, para los usos domésticos, para las artes, y en fin la mayor parte de ellas perece sin reproducción por faltarle las circunstancias á propósito para ia germinación. Las semillas pueden sin embargo conservarse aptas para germinar durante larguísimo tiempo, espe- cialmente cuando no son oleojinosas; en efecto, la superficie de la tierra está, llena de semillas en depósito que no esperan para desarro- llarse sino circunstancias favorables: después de tumbado un monte ó una selva se presentan plantas cuya existencia no se sospechaba en esa comarca, en donde parecen nuevas. Los medios de disemina- ción que empléala naturaleza para repartir las semillas por la su- perficie del orbe son los siguientes : los rios se las llevan desde la cumbre de las montañas con sus aguas hasta la mar que las trans- porta á los paises mas lejanos ; los vientos las esparcen en la inmen- sidad cuando están provistas de vello ó de alas; los animales mamí- feros y las aves que se tragan los. frutos enteros para alimentarse con su carne, sin dijerir las semillas las arrojan con sus excremen- tos; en fin, algunas semillas provistas de ganchitos se pegan al pelo de los animales que se las llevan consigo hasta que se caigan al suelo, etc. Además de las semillas la naturaleza emplea accidentalmente otros micdios de propagación de los vejetales; en efecto, cuántas ve- ces hemos visto ramosenteros separados del tronco, llevados mas ó menos lejos, sea por las tormentas, sea por las crecientes y aveni- das de los rios, producir un vejetal; otras veces ramitas dobladas accidentalmente'y en parte cubiertas de tierra, han echado también raices y se han vuelto otro vejetal, etc. Entonces el observador XXXII . DISCURSO PRELIMINAR. atento ha aprovechado esas lecciones de la naturaleza, las ha some- tido á las reglas de la ciencia, ha perfeccionado los procedimientos j les lia aplicado á la propagación de las especies útiles con muchísi- mo provecho. Pro'pagacion artificial de los xejetaUs. — 1° Por estaca, esquejes ó cogollos : ese primer mo'do consiste en tomar una rama provista de algunas yemas por su parte inferior, y, después de haberla hen- dido por la base, en introducirla en la tierra bastante húmeda como de unas 6 á 8 pulgadas, de manera que algunas yemitas estén en- terradas, á fin que de ellas salgan raices, como sucede de ordinario ; es preciso para eso escojer la estación en que la savia principia á estar en movimiento ; el semillero ó almaciga debe estar dispuesto de manera que esté al abriíi'o de los ravos fuertes del sol ó casi á la sombra y en un terreno bastante húmedo. Ese procedimiento se aplica á la propagación de los árboles de m.adera blanda y también de las plantas herbáceas, \ surte muy buen efecto ; la caña de azú- car, la caña brava, etc., se propagan así; las hojas de algunas plan- tas son igualmente susceptibles de arraigar por su inves á lo largo del peciolo, como se ve en las del naranjo y otras bastante coriáceas para mantenerse vivas durante algún tiempo después de clavadas en la tierra. — 2. Por margullo ó acodo : consiste en sacar del pié del vejetal que se quiere propagar ramitas ó retoños que tengan raices, y en sembrarles ; otras veces se les prepara artificialmente como sigue : se aplica á la parte inferior de una rama baja escojida para la propagación una ligadura bien apretada ó se le quita un ani- llo de corteza, para obligar á la savia descendiente apararse en este lugar y á formar un rejuelgo ó rodete circular de donde mas tarde han de salir las raices ; eso hecho se dobla la rama v se entierra en el suelo la parte correspondiente á la ligadura, sujetándola así para que se quede enterrada durante algunos meses; al cabo de ese tiempo y cuando ya tendrá bastantes raices, se la corta sea de una vez sea poco á poco si es delicada y se la sembrará en el lugar á pro- pí3sito. Ese método es muy bueno y con él se pueden propagar mu- chos vejetales; pero como hay muchos árboles que no tienen ramas bastante bajas, se suple á ese inconveniente de la manera siguiente: la ramita escojida y la ligadura aplicada como conviene, se la aplica una hoja de zinc, una yagua, un trozo de bambú, etc., dispuesto á manera de embudo y sujetado sólidamente como pulgada y media por debajo de la ligadura ; eso hecho se llena el aparato de tierra buena j desmenuzada, pero bastante apretada y suficiente húmeda: el único cuidado que hay que tener es, en la estación seca, echarle agua de cuando en cuando y á los 3 ó 4 meses de colocado, algo mas ó menos, se corta el ramo, se le siembra y ya se tiene otro individuo de la especie ó variedad que se quiere propagar : los naranjos, los nísperos y la mayor parte de los árboles se pueden propagar así con facilidad; es pues un procedimiento que se deberla emplear diaria- mente y vulgarizarse muchísimo en los países intertropicales para la multiplicación de las buenas especies frutales. — 3. Por injerto : tres modos principales hay de practicarle : 1. injertar de canutillo ó de púa, llamados también injertos de vastago ó vareta; 2. de escu- DEI. INJERTO. XXXIII déte Ó de yema; o. en fin, por aproximación. Ei primero consiste en introducir una púa ó vastago de un árbol en otro para injertarle, y esta operación se practica como sigue: después de escojido el pa- trón ó sujeto, que siempre debe ser bien vigoroso, de una especie mas duradera y fuerte que la que hay que propagar, pero siempre mu}' vecina de ella ó teniendo con ella la mayor analojía botánica posible; se le corta transversalmente á una altura mayor ó menor del suelo, según el tamaño y el objeto que se propone el agricultor, y eso hecho se le hace una hendidura vertical por la parte mediana ó según su diámetro transversal ó solamente uno de sus radios, con un instrumento cortante y al sacarle se le reemplaza por una cuña de madera á propósito que tenga la hendidura abierta por la circun- ferencia especialmente ; todo así dispuesto, se corta triangularmente ó á manera de la hoja de un cuchillo la base de la ramita escojida para injertar, de tal manera, que la cara mayor del triángulo cor- responda con la corteza, que ha de ser bien sana, bien viva, fina y de igual espesor que la del patrón ; sé introduce esa parte después en la hendidura de modo que la corteza de la púa corresponda per- fectamente con la del patrón; entonces, quitando la cuña se cierra la hendidura y la púa está cqjida de manera que sus partes herbá- ceas estén en contacto íntimo con las del sujeto, cuya savia no solo la va á soldar íntimamente con él, pero le va á llevar la vida y el alimento, de tal suerte, que ya no serán mas sino un solo individuo. Eso hecho hay que preservar la herida del aire, lo que se consigue cubriendo la herida del patrón y la parte inferior de la púa con una mezcla hecha con barro, bosta de buey y yerba seca, fina y bien flexible, y bastante agua : se la aplica de manera que forme un cono cuya base, mucho mas ancha que el sujeto, envuelva bien como lina pulgada y hasta mas de su parte superior; se la puede sujetar con un trapo, ó dejarla sin él, si la mezcla está bastante pegadosa. Se ha de escojer para hacer esta operación la estación en que la sa- via principia á entrar en movimiento ; se debe dar la preferencia á los sujetos jóvenes del tamaño como del dedo pulgar ó algo mas, j cqjer la púa ó vastago en un árbol de buena especie que ha produ- cido frutos ; debe tener la corteza fina, lisa y ser casi tan espesa ; debe además tener yemas sin hojas y ha de ser del año anterior. El injerto en corona ó cabeza no es sino una variedad del precedente, del cual se diferencia solo en que se practica sobre árboles ya adul- tos que han salido de mala especie; entonces se cortan horizontal- mente sus ramas gruesas y se aplica por su circunferencia un nú- mero mayor ó menor de púas; de esa manera el patrón es múltiple en lugar de ser único como en el primerease: ordinariamente sale bien, pero no con tanta facilidad ; solamente, en lugar de henderle, se despega su corteza con cuidado y se introduce la púa, cortada á manera de escarbadientes, entre ella y la madera, y después se aplica la mezcla como lo tenemos dicho. Se debe practicar cuando la savia está ya en completo movimiento ; de esa manera se renueva un árbol entero y se le hace producir frutos muy buenos y muy sa- brosos, en lugar de los malos que paria antes ; 2. injerto de escu- dete ó de yema : se practica haciendo en la corteza del patrón, TUMO i 3 XXXIV DISCURSO PRELIMINAR. cuando la savia está en movimiento ó en la estación de las lluvias en los paiscí^ intertropicales, una incisión con figura de T, eso hecho se toma del árbol que hay que propagar una yemita con su corteza y hoja correspondiente, después de cortado el limbo, dejando sola- mente el peciolo á veces con la base de la hoja, de quitado una parte de la leña que se queda pegada á la yema, de cortada hori- zontalmente la parte superior de la corteza del escudete, cuya infe- rior es puntiaguda, se le introduce con precaución por la parte ver- tical de la T, de-pegando al mismo tiempo con mucho cuidado la corteza del sujeto; introducido así se aplica esactamente el corte horizontal del escudete al de la T, de manera que las cortezas se correspondan perfectamente ; eso hecho se le sujeta con un pávilo de algodón ó un hilo de lana, apretando bastante para que la inci- sión esté casi cerrada ; es preciso darle sombra, los que se debe hacer también para los demás injertos, porque el sol lo mataría con ma- yor prontitud. Se reconoce que ha pegado ó que está para salir fe- lizmente cuando el peciolo se despega con facilidad, que la yemita es bien verde y viva; es preciso vigilarla y cuando principiará á brotar se soltará el pávilo y se quitarán las principales ramas del sujeto, á fin de que reciba mayor cantidad de savia, y á veces hasta todas, pero dejándole hojas. Es preciso tener mucho cuidado en sa- car todos los retoños que se presentan por debajo del escudete ; el injerto de corteza no es otra cosa para nosotros sino una variedad del de escudete; en efecto, se diferencia solamente en que se quita de la rama escojida para injertar, después de cortado el vértice, un anillo de corteza largo como de una pulgada, teniendo á lo menos una yema y mejor algunas ; al sujeto escojido de antemano y del mismo tamaño que la rama se le quita también un anillo de cor- teza igual al de la ramita que ha de reemplazarle ; eso hecho se aplica el anillo sacado del ran)0 en el lugar de el que se ha quitado al patrón, de manera que los cortes de las dos cortezas se corres- pondan perfectamente, y después se le sujeta con un pávilo y se le da sombra ; las higueras se injertan de esa manera; 3. por aproxi- mación : consiste en hacer sobre dos ramas vecinas dos cortaduras triangulares iguales, de manera que, aplicándolas la una á la otra, la parte cortada de la corteza corresponda perfectamente, y se les sujeta así leña contra leña, y se cubre de mezcla. Esta sencilla ope- ración ha de practicarse durante la estación de la savia, y al cabo de algunos meses de contacto, cuando ya la soldadura se habrá verifi- cado y que estará sólida, se separará la rama que constituye el in- jerto y se cortará el vértice de la que es el sujeto, y asunto con- cluido. Los injertos por aproximación son los únicos que puede verificar la naturaleza sin el auxilio del arte, bastando que cuales- quiera parte* similar cuya corteza llegue á rozarse ó desprenderse, se ponga en contacto por algún tiempo. Para que los injertos salgan bien es necesario que haya siempre analojía botánica entre el veje- tai que hay que propagar y el sujeto ó patrón; deben ser puesá lo menos de la misma iamilia natural y en la misma tribu, de géneros muy vecinos, y mejor, si se puede verificarse esa operación, entre especies del mismo género. Esta operación es no solamente muy DE LA MADURACIÓN DE LOS FKÜTOS. XXXV útil, pero á iiuei¿tro pobre parecer, de absoluta necesidad para ia agricultura; en efecto, por su medio se pueden multiplicar á su gusto las especies y variedades de los vejetales útiles, se mejoran y perfeccionan las especies y se consiguen mejores y mas prontos pro- ductos ó frutos. Se liabrá pues de injertar el níspero sobre las espe- cies silvestres del mismo género, como balatas, ausubos, etc., tan comunes en los paises intertropicales; las mameyes dulces sobre sujetos que no han parido todavía, á fin de tener seguridad que da- rán buenos frutos; hacen lo mismo con los naranjos, los mangos, etc., y repitiendo esa operación durante algunos años de seguida, con el cuidado de escojer siempre para injertar el último palo injer- tado y por consiguiente cuyo producto ya está mejorado, se conse- guirán frutos deliciosos y se hará desaparecer sea el sinnúmero de pepitas que contienen, como las guayabas, guanábanas, etc., ó los huesos tan gruesos que forman casi todo el fruto, como sucede en el mamey, ó esas fibras tan desagradables que visten el de los mangos. Se podrá muy bien injertar la parra de Europa sobre la vid silves- tre de las Antillas, la higuera do Europa, tan raquítica en los paises intertropicales, sobre una de esas higueras tan vigorosas y tan abundantes en las Antillas, y sin duda para nosotros se conseguirán muy buenos resultados; el lechi, fruta deliciosa de la China, que he- mos comido en Trinidad, sobré el mamón. Se puede además con el injerto volverlos árboles dioicos monoicos, dando al pié masculino ramas femeninas que le hagan fecundo y al femenino algunas mas- culinas que aseguren la fecundación. Esplanacion de los fenómenos oue los frutos esperimentan al ma- durarse, y de los cambios químicos que de eso resultan en su com- posición. Los lonómenos químicos que pueden servir para plantar ia teoría de la maduración de los frutos, han sido estudiados pocos años hace por los señores Decaisne y Fremy; por los trabajos de esos sabios se sabe ahora ; 1. que la proporción de agua contenida en el pericarpio ó parte carnosa de los frutos es siempre mayor y varia desde 75 hasta 90 por 100 ; en algunos frutos esa proporción se queda igual durante los varios períodos que han de transcuriir para llegar á la madurez completa; sin embargo, por lo común, al principiar tales movimientos orgánicos, la proporción de agua se va aumentando poco á poco y gradualmente, para mas tarde ir dism.i- nuyendo de la misma manera v asaz notablemente ; 2. ciue los frutos de la misma clase, analizados en igual estación del año, contienen constantemente igual proporción de agua; las varias partes del pe- ricarpio del mismo fruto han dado siempre al análisis igual propor- ción de agua; 3, que la proporción de sustancia sólida contenida en el pericarpio de los frutos puede variar desde 10 hasta 25 por 100, y consiste en principios orgánicos solubles que, unidos con el agua, forman el suco de los frutos y también en otras sustancias insolu- bles que forman la membrana azoada ó no que forra las celdillas y cuyo papel tenemos esplicado mas arriba, fibra vejetal, etc.; 4. que la cantidad de las sustancias solubles se va siempre aumentando con los adelantos de la madurez", mientras al contrario y necesariamente el peso de la parte insoluble del pericarpio va al mismo tiempo dis- XXXVI DISCURSO PKELIAIINAE. minujeiido. Se puede decir pues que una parte de los principios so- lubles contenidos en el suco de los frutos se forma á espensas de la parte no soluble del pericarpio. Los cuerpos que se vuelven entonces solubles son el almidón, la pectosa y otro principio particular llama- do gomosa y que se transforma en goma. A tales reacciones ó meta- morfosis se puede sin duda alguna atribuir los varios cambios que se observan en el color, la transparencia y el ablandamiento que esperimentan los frutos al madurarse. La presencia de la pectina en los frutos maduros proviene de la acción de los ácidos orgánicos y de la pectasa sobre la pectosa; 5. muchas veces vemos salir de los frutos ácidos un suco neutro que después de seco parece goma, cons- tituye la gomosa, sustancia insoluble en el agua, y que, bajo la in- fluencia de las sustancias azoadas, tiene papel de fermento y quizás al favor de los ácidos se modifica y se vuelve goma, que mas luego ha de transformarse en azúcar en el interior del pericarpio ; la parte que de ella solara sale por afuera, por las grietas naturales de las frutas y se solidifica en su superficie; 6. el azúcar que se halla en los frutos maduros proviene de varias metamorfosis que han espe- rimentado los elementos de algunos principios inmediatos; así el almidón, que se halla en proporción mayor en los frutos verdes, co- mo verbigracia el plátano, el mamey, el mango, etc. desaparecerá mas ó menos completamente cuando habrán llegado á su completa madurez y se habrá vuelto glucosa, que lo reemplaza y que proviene sin duda de la reacción de los ácidos orgánicos sobre él ; la goma también debe volverse azúcar ó concurrir á su formación. El tanino ó curtiente, que existe con tanta abundancia en la mayor parte de los frutos no sazonados y especialmente en los ya mencionados, va disminuyendo poco á poco y gradualmente á medida que se van ma- durando los frutos, que después de maduros no tienen sino una corta cantidad de ese cuerpo que ha sido reemplazado también por glu- cosa. En efecto, ese principio orgánico puede, obedeciendo á la in- fluencia de los demás ácidos que están junto con él en las frutas, de los fermentos y también del oxíjeno del aire, dedoblarse y volverse glucosa; 1. la desaparición de la acidez en los frutos maduros ó so- lamente sazonados es un hecho de que se puede dar razón de varios modos. En efecto, los esperimentos hechos á propósito han probado que ese fenómeno no se puede atribuir ni á la saturación de los áci- dos orgánicos contenidos en ellos, por las bases sea terrosas sea al- calinas, porque analizado el zumo en varios períodos de la madura- ción, se ha siempre hallado en él igual proporción de las bases minerales, y nunca ha aumentado aunque vayan desapareciendo los ácidos libres ; ni tampoco la acidez está disfrazada por el azúcar ni por la presencia de las sustancias mucilajinosas que se hallan siem- pre en mayor ó menor cantidad en los frutos maduros. Si se aprecia comparativamente la acidez de los frutos verdes con la de los ya sa- zonados ó maduros, esos últimos son siempre mucho menos ácidos ó contienen menor proporción de ácidos libres, cuyos elementos sin duda esperimentan metamorfosis tales que se vuelven otros cuerpos y quizás glucosa y mucílago. Cuando los frutos privados de la influencia de la luz se van madu- ACCIÓN DEL CALÓRICO SOBRE LOS FRUTOS. XXXVII rando en la oscuridad, entonces la clorofila ó resina verde y el hi- drójeno disminuyen al absorber el oxíjeno del aire y unas materias colorantes rojas y amarillas salen de esta reacción; entonces los ácidos tartárico, málico y tánico desaparecen y están reemplazados por azúcar, fécula ó goma; esta reacción aunque maravillosa se puede esplicar con facilidad como sigue : en efecto, 6 equivalentes de ácido tartárico pueden, con otros tantos equivalentes de oxíjeno atmosférico, volverse glucosa, y 12 equivalentes de ácido carbónico nacidos de esa metamorfosis se exhalan en la atmósfera, de la misma manera 2 equivalentes de ácido tánico con 8 de oxíjeno y 4 de agua pueden trasformarse en 1 equivalente de almidón y 6 de ácido carbónico que se evaporiza, y el almidón así formado se vuel- ve azúcar mas tarde. Se podría pues, siguiendo así, interpretar con bastante facilidad la formación ó producción de la mayor parte de los principios inmediatos orgánicos que nacen en iguales circuns- tancias y por consiguiente dar razón de las varias metamorfosis ó transformaciones ulteriores que han de sufrir sus elementos; pero lo que acabamos de escribir sobre el particular nos parece suficiente para que se comprendan bien tan numerosos y tan maravillosos fe- nómenos. Durante el tiempo que los frutos gastan para llegar á su madurez completa, su pericarpio tiene que esperimentar tres modi- ficaciones principales ó ha de pasar por tres períodos distintos que se pueden caracterizar del modo siguiente : en el primero, los frutos obran sobre el aire atmosférico á manera de las hojas, de tal suerte que se forman entonces los principios solubles, y su proporción se va aumentando cada dia mas y á medida que se desarrolla el fruto, los principios inmediatos formados en ese período son el tanino, el azúcar, la pectina, goma, ácidos cítrico, tartárico, oxálico, etc. El segundo período consiste en la madurez completa y lejítima de los frutos que ya no tienen igual acción sobre el aire, porque en ese último caso, al absorber el oxíjeno, que se transforma en ácido car- bónico, sus principios solubles esperimentan una especie de com- bustión lenta y succesiva, cuyo efecto consiste, en primer lugar, en que los ácidos orgánicos estén destruidos, ó mejor, sus elementos sufren las variadas metamorfosis que tenemos señaladas algo mas arriba, y se han vuelto pues azúcar y demás cuerpos que no tardan á su vez á desaparecer ó á descomponerse ellos mismos; en efecto, en el último período que principia cuando el fruto ya bien maduro se ha vuelto ya muy blando y qué su naturaleza ha cambiado ya, como sucede para los nísperos de Europa, ciertas clases de peras, etc., y que se concluye al podrirse el fruto; el aire penetrando en- tonces en la celulosa, las sustancias azoadas se vuelven prietas y se trasforman en fermentos alcohólicos, y la celulosa está destruida. Tales fenómenos tienen por objeto final destruir y desagregar com- pletamente el pericarpio para que, puesta en libertad, la semilla pueda cumplir con su objeto que es germinar y producir un vejetal nuevo. Acción del calórico artificial sobre los frutos y formación de las jaleas vejetales. La pectina, que se halla, como todos lo saben muy bien, en mayor abundancia en el caldo de los frutos cocidos, que en XXXVIII DISCURSO PRELIMINAR. ese líquido esprimido sin la intervención previa de un calor gra- duado y á la par manso, resulta de la acción química que tienen los ácidos orgánicos del fruto sobre la pectosa contenida adentro de sus celdillas. La formación de las jaleas vejetales se lia pues de atri- buir : 1. á la transformación de la pectina en ácido péctico, meta- morfosis que se verifica por medio de la pectosa; 2. á la formación del ácido pectoso al favor de la acción menos prolongada de dicha pectosa sobre la pectina ; 3. en fin á la disolución del ácido péctico formado bajo la influencia de las sales orgánicas contenidas en las frutas. Diariamente vemos cuajarse y volverse jalea con mayor fa- cilidad, el caldo de grosellas de Europa al mezclarlo con el de fram- buesas, lo que se esplica porque este último tiene una gran propor- ción de pectosa que haciendo papel de fermento obra de tal manera sobre la pectina que la vuelve acto continuo ácido pectórico jelati- noso, el cual constituye la jalea vejetal. Cuando un fruto carnudo, como las guayabas ó guanábanas por ejemplo, se pone al fuego con bastante agua, entonces esperimenta las modificaciones siguientes : su parte acida formada por los ácidos vejetales málico, cítrico, tar- tárico, tánico y agálico tiene en primer lugar sobre ]a pectosa una acción química tol que la vuelven pectina, la cual hace el caldo vis- coso y de esta manera disfraza la acidez del fruto, lo que diaria- mente sucede con las limonadas ó naranjadas cocidas; en segundo lugar la otra parte de pectina formada produce una cierta cantidad de ácido pectósico que, disuelto en el líquido caliente, se cuaja en jalea por su enfriamiento; y además si la acción de la pectosa estu- viera mas prolongada el ácido pectósico formado se podría á su vez volverse ácido péctico. Si al contrario el fruto estuviera espuesto á la acción casi repentina de una lumbre fuerte, de tal manera que su cocción se verificase con mucha prontitud, en tal caso la pectosa es- taría cuajada acto continuo y perdería por consiguiente su poder catalítico Y seria incapaz de obrar sobre la pectina, la cual no espe- rimentando las metamorfosis señaladas el caldo vejetal al enfriarse no se volvería jalea. Durante el cocimiento de un fruto la pectosa sola está esperimentando las reacciones mencionadas, mientras la celulosa se q'.ieda tal cual sin sufrir nada de la acción del calórico. Las plantas parásitas teniendo mayor interés para la agricultura por causa del perjuicio que sufren de ellas los agricultores, nos pa- rece no fuera de propósito echar sobre ellas al paso algunas consi- deraciones. Tienen, como todos lo saben muy bien, sobre los vejeta- les que atacan , una infiuencia mas ó menos funesta y siempre perjudicial, que tiene relación íntima con su manera de vivir. En efecto las unas son parásitas lejítimas, es decir que viven á espensas de los vejetales sobre los cuales están pegadas, mientras las seudo- parásitas no sacan nada de los vejetales sobre los cuales viven, tales son ciertos musgos, liqúenes, muchas orquídeas, muchas tillandsias, etc., solamente están pegados en la superficie del vejetal que han invadido, y el inconveniente que tienen consiste en que está siempre mas ó menos húmedo, tapan con sus raices las estomas, entorpe- ciendo así la respiración cutánea ; ocultan los insectos nocivos, com- primen ó aprietan con sus raices las raraitas que necesitan engrosar DEL ENVENENAMIENTO DE LOS VE JÉTALES. XXXIX é incomodan las hojas porque se desarrollan con demasiado vigor, por esas razones se recomienda quitarlas con cuidado de todos los vejetales útiles. Las verdaderas parásitas al contrario viven siempre á espensas de los vejetales sobre los cuales están pegadas y sangui- juelas vejetales sacan de ellos mas ó menos sangre vejetal ó savia ; no estando en general provistos de órganos completos, no pueden bastarse á sí mismos, j por consiguiente no devuelven nada nutri- tivo á los que les cargan, de modo que no hacen mas que perjudi- carlos. Todas las parásitas fanerógamas, como los lorantos, los muérdagos, etc. , atacan las plantas por el esterior y por consiguien- te se sacarán del mismo m^odo que las falsas parásitas, y bastará pa- ra eso limpiar con cuidado de ellas los vejetales que tienen acome- tidos. Pero no es así para las parásitas criptógamas, cuya m.ayor parte nacen en el interior de los vejetales, sino cerca de la superfi- cie, lo que hace que se necesita mucho mas cuidado y atención para poder destruirles. Para que sobresalga todavía mas la analojía que existe entre los seres organizados de la naturaleza asentaremos aquí algunas consi- deraciones generales sobre el envenenamiento de los vejetales. En efecto, los animales no son los solos que se pueden envenenar : los vejetales están casi sujetos á iguales leyes y los venenos tienen so- bre ellos una acción análoga cuyo efecto es también la muerte. Es- cusado es decir que los animales se pueden envenenar ya sea por la introducción directa del tósigo en las vias dijestivas, 3^a en la circu- lación de la sangre, á consecuencia de las heridas, jsl indirecta- mente por medio de los pulmones ú órganos análogos respiratorios. Tales distinciones se pueden también establecer para los vejetales: en efecto la absorción por las raices puede muy bien considerarse como correspondiendo al primer modo ; la introducción forzosa de una sustancia tosiga en una herida practicada en una parte á propó- sito del vejetal corresponderá pues con la segunda manera, y en fin, la acción de los gases deletéreos en la superficie entera del vejetal representará perfectamente el último modo. Cada veneno puede obrar con mas ó menos intensidad y puede ser ó no venenoso, según se emplea de una ó de otra de esas tres maneras, lo que sucede lo mismo también en el reino animal : el ácido carbónico, verbigracia, respirado en cierta cantidad es veneno, mientras que al contrario, introducido en el estómago, no pasa mas allá entonces de ser un es- citante agradable y muy empleado-; el veneno de las culebras bra- vas ó ponzoñosas puede tragarse sin peligro alguno, mientras que el animal mismo que lo tiene puede ser muerto por su propia morde- dura. Casi todas las sustancias venenosas para los hombres y los animales lo son también páralos vejetales, y hay además sustancias muy inocentes páralos primeros que son venenos para los segundos. La intensidad de la acción tosiga no es la misma pues para los don reinos, y eso no podia ser tampoco ; así vemos diariamente el alco- hol, los éteres, los aceites, las aguas aromáticas, las materias amar- gas lejítimas, no dañar por lo regular á los animales, sino tomados en dosis muy fuertes, mientras que para los vejetales son sustan- cias muy venenosas ; los óxidos de plomo, venenosos para los hpm- XL DISCURSO PríELlMINAfí, bres, no lo son ó lo son muy poco para los vejetales. Los venenos obran con mavor prontitud en los vejetales que en los animales, pe- ro su acción se queda limitada á los órganos á donde llegan, mien- tras que se estiende átoda la economía animal ; se puede decir pues que en los vejetales el envenenamiento es local , mientras que en los animales es siempre general. De lo dicho se lia de inferir que no se deberá omitir cuidado alguno para preservar los vejetales úti- les de los vapores v de los gases que .vician artificial ó naturalmente el aire atmcsférico: en efecto, basta visitar una sola vez los alrede- dores de una de las numerosas fábricas que echan en la atmósfera gases ó vapores ácidos ó solamente mucho humo de ulla para con- vencerse al momento de la influencia funesta de tales emanaciones sobre la vejetacion. No pasarem.os adelante sin ei.tender aquí algunos renglones sobre la geografía botánica, ciencia enteramente nueva y por dicha razón muy poco conocida y estudiada solamente por los sabios, muy vasta por supuesto y del mayor interés, porque, como la botánica su ma- dre, está íntimamente enlazada con las demás ciencias, y cuando se trata de los vejetales útiles, tiene para la agricultura mayor impor- tancia para la aclimatación de las especies exóticas. Apena? hace 60 años que los magníficos trabajos del célebre A. de Humboldt han echado los cimientos de esta ciencia, que ha sido después cultivada en Inglaterra, en Francia y especialmente en Alemania por muchos sabios cuyos trabajos la han hecho adelantar muclio, y sin embargo hoy en dia apenas ha salido de sus mantillas. La geografía botánica es pues aquella parte de la botánica que trata de la distribución de los vejetales en la superficie del globo. Los vejetales espontáneos, en efecto, no están repartidos unifor- memente en toda la tierra; cada cual tiene su patria ó su pais de predilección en que se le encuentra siempre, y los límites que tie- nen asignados dependen de algunas leyes ó causas tan pronto físicas como fisiolojicas, de tal manera que no pueden vivir y multipli- carse sino en los lugares en donde las varias circunstancias ó condi- ciones correspondientes con su organización, tan diversamente mo- dificada en el sinnúmero de vejetales diferentes conocidos y clasifi- cados, están reunidas ; espresándonos de otra manera diremos que la diversidad de las numerosísimas circunstancias que les rodean y que son especiales á cada lugar, ha dado nacimiento á vejetales mas ó menos distintos los unos de los otros, y una vez ya nacidos se han esparcido en otras comarcas en donde habrán liallado casi iguales condiciones, modificándose sin embargo con el tiempo en aquellas nuevas circunstancias climatéricas y demás que les tienen constan- temente rodeados. La observación pues demuestra con mayor clari- dad que todos los vejetales no han salido de un único centro de crea- ción, de donde después de nacidos se habrán esparcido por todo el orbe, y cada dia se va reconociendo mejor por los trabajos de los botánicos que cruzan por todos los países del mundo, que al princi- pio hubo muchos centros de creación páralos vejetales, teniendo cada uno su flora propia, bien que algunas especies parezcan haber salido á la vez de algunos centros diferentes. La distribución de los. DE LA ar.OGRAi'IA r.OTAXICA. XLI vejetales en la superficie de la tierra resulta pues del concurso si- multáneo ó sucesivo de una multitud de causas muy complicadas; la> unas, puramente físicas, provienen de la naturaleza misma de los vejetales y á la par de la presencia de los aj entes físicos que les rodean sin cesar; miei tras las otras ocultas á nuestras investiga- ciones porque están enlazadas con algún misterio del oríjen de los seres ; y además á tales causas ya demasiado numerosas se ha de añadir el hombre, que combinando y disponiendo tan pronto á su gusto como á pesar suyo y con mayor frecuencia hasta sin saberlo, las condiciones necesarias á la existencia de las plantas, va cada dia naturalizando ó aclimatando en ciertas comarcas nuevos vejeta- les estranjeros, pero que encuentran en ellas bastantes circunstan- cias análogas á las de su pais natal, para que puedan vivir y hasta prosperar en esta patria de adopción y salirla muy provechosos. La existencia de unas plantas con preferencia y esclusivamente en un lugar mejor que en otro sitio, resultando de la naturaleza fí- sica de tal parage en donde se hallan estos vejetales, constituye su estación, mientras que se ha dado el nombre de habitación al pais en donde viven; cada planta ó vejetal tiene pues siempre y necesa- riamente una estación y una habitación, porque se cria espontáneo en una tierra ó valdío de un pais conocido; al decir por ejemplo que una planta crece en los arenales de las cercanías de San Juan de Puerto-Rico, Cangrejos verbigracia, la estación es los arenales y la habitación las cercanías de San Juan de Puerto-Rico, ó Cangrejos. Tal distinción se puede hacer tan pronto hablando de individuos y de especies, como de géneros, de tribus y hasta de fp.r/iilias; se dirá pues que las algas, familia, viven en las aguas tan pronto dulces como saladas, estación, de Europa, de Asia ó de América, etc., ha- bitación; que el bejuco amargo, aristolocMa trilohata, se halla en la boca de los rios ó en los manglares, estación, de Cangrejos ó del Dorado, liaMtacion. pueblos de la isla de Puerto-Rico. Cuantas pre- guntas se nos han hecho que se podian resolver y contestar casi á favor de los solos conocimientos que proporciona esta ciencia? tal será, por ejemplo, la siguiente: ¿Cuáles vejetales se crian en tal estación ó en tal pais de que estamos tratando, y cuáles serán los que en él se podrán aclimatar y cultivar con provecho? ¿En qué pais habrá nacido y vivido la planta tal ó el género cual que tenemos en mano ó que se nos presenta ? Es preciso pues, para que una planta pueda vivir en un pais ó en una localidad dada, no Folamente que exista allá la semilla ó el ger- men de la especie, pero también es necesario que el clima, el terre- no, etc., y en una palabra que todas las circunstancias ó condiciones esteriores tanto físicas como geográficas estén tales como conviene á su organización ; sin la reunión de tales circunstancias no se puede efectuar el desarrollo normal, y cuanto menos la planta vive lán- guida, enfermiza y no se reproduce. La relación pues entre la orga- nización de cada planta y las condiciones esteriores en que se puede encontrar es lo que al parecer determina en gran parte su existen- cia en un lugar con preferencia á otro, ó quizás uno se aproximarla mas á la verdad diciendo que las condiciones esteriores tanto físicas XLII DISCURSO PRELIMINAR. como geográficas de una localidad preexi:;tiendo al nacimiento de los vejetales de tal región, tienen preparado de antemano lo que por su presencia ba de determina!' necesariamente su organización particular y apropiada á las necesidades de su vida en esa comarca. Los vejetales están repartidos do una manera mu}' desigual por la superficie de la tierra; en efecto, ciertas especies se hallan reu- nidas en un espacio muy limitado, mientras otras, al contrario, están esparcidas en muchos lugares á la vez; algunos hay que son espe- ciales de unos paises, á veces bastante limitados: otros aparecen al contrario en muchas comarcas ú la vez; los límites entre los cuales está contenido ó encerrado un vejetal, una especie, un género y hasta una familia, se llaman arca, y las especies cuya área se va estendiendo mucho en latitud como en lonjitud, no pueden servir para caracterizar una rejion especial; al contrario, aquellas cuya área está muy limitada caracterizan muy hien la vejetacion de tal co- marca, cuyos límites no traspasan; se hade considerarlos pues como estando con el clima y con las condiciones físicas del pais ó de tal sitio en correspondencia mas íntima que los demás vejetales ; se de- berán pues elejir con preferencia tales vejetales para caracterizar las rej iones botánicas á que pertenecen, y además, entre aquellas especies se habrá siempre de dar la preferencia á los árboles, por- que estando espuestos todo el año á las muchas vicisitudes del clima, suministran una designación mucho mas exacta; las plantas herbá- ceas, en efecto, especialmente las anuales, que viven durante una sola estación del año, no pueden pues esperimentar todas las influen- cias climatéricas, y por esta razón no deben ni pueden tampoco to- mar parte en la formación de la fórmula representativa del clima y de la rejion botánica. El señor A. de CandoUe dice que los géneros que contienen ma^^or número de especies tienen también área ma- yor, así también, la área de las tribus y hasta de las familias es tanto mas vasta cuanto mas considerable es el número de géneros que la componen. Cuando una especie vejetal se cria espontánea en dos ó en algunas comarcas separadas por grandes intervalos, en los cuales se hallan paises en que faltan, se puede decir que su patria es multíplice y su área disjunta; hay pues algunas especies que viven á la vez en las rejiones polares, verbigracia, y en las cumbres nevo- sas de los Alpes, tanto europeos como americanos y hasta asiáticos. Con mayor frecuencia, cuando unos climas, bien que lejanos, se pa- recen, se encuentra en los paises que les tienen vejetales de iguales géneros, pero rarísimas veces las mismas especies; si la analojía climatérica está va menos íntimia, se hallan solamente los de las mismas familias. Algunos géneros hay cuyas especies todas están agrupadas en una comarca única, y otros por el contrario cuyas es- pecies, bien que poco numerosas, están muy esparcidas. La área de ias familias y de los géneros puede estar dispuesta así como la de las especies, y aun con mayor razón y mayor frecuencia lo es, porque es habitualmente mucho mas vasta, unos géneros se pueden llamar sociales, así como algunas familias y también ciertas especies, por- que sus individuos viven siempre juntos, casi agrupados y poco es- parcidos. La zona intertropical, en donde estamos escribiendo estqs DE LA GEOGrRAFIA BOTÁNICA. XLIU renglones, así como la tórrida ó equatorial, presentan una vejeta- cion enteramente diferente de la de Europa, tanto por su asom- brosa lozanía y por la maravillosa variedad de las especies que la forman y por el sinnúmero de formas mas esti^vagantes las unas que las otras que afectan, como por los caracteres particulares de un gran número de los vejetales que la constituyen, cuyas leñosas están en proporción bastante mayor en aquellos países, y si, lo que sucede con frecuencia, la humedad y la riqueza del terreno se hallan junto con el calor continuo de la temperatura elevada de tales paí- ses, se ven monstruosos árboles formando vastísimas selvas de un aspecto particular y característico, compuestas de una multitud asombrosa de especies diferentes que todas concurren á porfía para hermosear tan grandiosos paisajes. Se observan pues en tales montes, cuya existencia remonta casi á los primeros dias del mun- do, tan larga es la vida de la mayor parte de los árboles que la ifor- man, un sinnúmero de bejucos ó enredaderas cuyos tallos, mas ó menos gruesos, mas ó menos largos, tan pronto volubles como tre- padores, se van enlazando por encima de los estipes y de los troncos para formar impenetrables retiros nunca jamás pisados por la planta del hombre y en donde la naturaleza todavía vírjen reina como dueña absoluta. En las rejiones ó climas mas templados, en don- de las estaciones del año están bien marcadas, en la una se ven aparecer las flores, la otra hace madurar los frutos, en la cuarta se ve con mayor placer la naturaleza salir del sueño le- tárjíco en que se encontraba sepultada durante algunos nieses de la tercera, para adornar casi de repente con una hermosísima al- fombra verde la tierra ya descansada. Durante esta triste estación parecía vestida de luto, porque la mayor parte de los vejetales que la adornan, habiendo perdido todas sus hojas, se quedaban palos desnudos que parecían muertos, pero que en realidad no estaban sino dormidos, porque durante ese período seguían vejetando inte- riormente y sus funciones orgánicas se verificaban sin interrupción ninguna, aunque á escondidas, como sucede diariamente á los anima- les y también á los hombres cuando después de una larguísima car- rera se caen como muertos de cansancio y se quedan como privados, durante el tiempo necesario para el descanso de sus órganos, y en- tonces vuelven en sí listos para volver muy luego á emprender igua- les trabajos ó carreras. En las zonas equatorial é intertriopical, como el año no tiene sino una sola estación, que se suele sin embargo dividir en dos, la del calor seco y la del calor húmedo ó délas lluvias, todas las fases de la veje- tacion están por consiguiente confundidas, y por otra parte la fuerza de ia vejetacion, estimulada casi siempre porlo especialmenle cuando se trata de las especies mas imperfectas y que ocupan los grados mas infe- riores de la serie de los seres, mientras que los caracteres diferen- ciales y específicos se hacen tanto mas numerosos y sobresalientes cuanto mas elevados estén en la escala orgánica. Los animales y los vejetales pueden pues considerarse como formando dos series gra- duales ó como dos cadenas ascendientes saliendo de un punto ó de un oríjen común; pero á medida que se van apartando la una de la otra, los seres que forman sus eslabones se van modificando gradual é insensiblemente, de tal manera, que no tardan á parecer seres en- teramente distintos y que á primera vista no se pueden comparar los unos á los otros por ser tan notables las diferencias que entre ellos existr-n. TOMO I LIBRO II ORGANOGKAFIÁ 6 DE LOS ÓRGANOS DE LOS VEJETALES DE LAS PUísXIONES QUE TIENEN QUE DESEMPEÑAR Un vejetal perfecto se compone de las raices, por medio de las cuales se queda pegado j sugetado en el suelo ; del tallo que carga con las ramas y ramitas, las cuales llevan las hojas, las flores j los frutos; el estudio de tales órganos constituye pues la organografía ó descripción de los órganos vejetales. Los vejetales así como los animales presentan al estudio dos gran- des funciones que en sí reúnen todas las demás, y que tienen por ob- jeto, la una, la conservación del individuo," y se llama nutrición, mientras que á la otra, que es la de la generación, tócala conserva- ción de la especie. SECCIÓN I DE LA NUTRICIÓN Y DE LOS ÓRGANOS CON QUE SE HA DE VERIFICAR CAPÍTULO PRIMERO DE LA raíz. Se llama así al órgano con que el vejetal está sujetado al suelo y en que penetra mas ó menos, según la clase de planta á que perte- nece, pero que siempre saca de la tierra, por medio de los chupa- deros que terminan sus divisiones mas delgadas, los líquidos y los gases que nece&ita y á la vez las sales y otras sustancias terrosas y BOTÁNICA ELEMENTAL. — ORGANOGEAFÍA. — DE LA RAÍZ. 67 alcalinas indispensables á su existencia, como lo tenemos dicho en el Discurso preliminar, Se llama lase á la parte superior que se continua con el tallo, y el punto de juntura ha recibido el nombre de cuello ó nudo vital, porque es la parte de la raiz en donde reside la vida y de donde ha de salir siempre el tallo ; el ápice será pues la parte diámetralmente opuesta ó inferior, la intermedia se dice cuerpo de la raiz ó nabo, como se ve en las zanahorias. G. 1137. La raiz se divide poco ó mucho, dando oríjen á raices secundarias, ramas y ramos radicales dirijiéndose siempre de arriba abajo, que adelgazándose cada vez mas, producen el conjunto de filani^ntos que se denomina heiras ó cabellera. Hay fibrillas ó barbillas dife- rentes de las ramillas radicales, sin que puedan convertirse en es- tas por ser perecederas, cuyas funciones absorben el jugo de la tierra, etc., como lo hacen las estremidades celulares tiernas, pero no siempre desprovistas de película epidérmica, á las que se ha dado el nombre de esponjillas. Iguales órganos absorbentes tienen en sus estremidades las raices compuestas ó que proceden de muchas bases, formando un manojo de raices sim2)les con frecuencia, mientras que son casi siempre ramosas las de base única. Es el primer órgano que se desarrolla en la vejetacion y tiene una tendencia manifiesta á huir de la luz. Plantas hay cuyas raices nunca penetran en la tierra, pero sí en los vejetales sobre los cua- les viven, mas no son raices lejítimas pero chupaderos mas ó menos desarrollados que sacan de los otros vejetales su alimento, tales son las parásitas lejítimas, los viscos y lorantos. F. 47. Las raices suelen faltar muy raras veces ; sin embargo se conocen plantas pegadas en las rocas ó en la corteza de los árboles que no tienen raices lejíti- mas : tales son los liqúenes, F. 3, ciertos hongos, F. 2. Las algas no tienen raices lejítimas tampoco, porque son garras que las suje- tan en las piedras, F. 1. Las orquídeas epífitas tienen raices lejíti- mas á veces muy largas con que se quedan sólidamente sujetas en los troncos ó ramas de los árboles sin penetrar de ninguna manera en su corteza y sin sacar pof consiguiente nada de ellos, no pene- tran nunca jamas en el suelo pero chupan el agua y el alimento de la especie de humus formado por medio de las sustancias vejetales que se amontonan mas ó menos en su derredor y en donde se des- componen. La duración de las raices determina la de las plantas á que perte- necen, y de aquí se suelen dividir unas y otras en anuales, bienales ^perennes ó 'perenales, según si duran un año, como el maiz, G. 172; dos años, floreciendo v fructificando en el se^'undo, como la zanaho- ria, G. 1137, ó mas de dos años, lo que sucede para muellísimos vejetales. La consistencia de las raices variando en diversas plantas se las ha llamado lieriáceas, leñosas, carnosas, huecas y sólidas ó macizas. Según su dirección, su forma y su estructura se les ha dado los nom- bres siguientes : 1. según su dirección relativa con el suelo se dicen perpendiculares ó verticales, oUicuas ó inclvnadas, horizontales y descendentes : en ese último caso bajan después de haber caminado horizontalmente ; consideradas en sí mismas se llamarán redaos, en- 68 BOTÁNICA ELEMENTAL. corvadas, ondeadas ó tortuosas y retorcidas; 2. atendiendo á sus formas se les ha impuesto los epítetos áefMformes, cilindricas ; tu- berosas, cuando tienen bultos mas ó menos redondeados, en oposi- ción de las simplemente /Zií'05«5, que no les presentan pero se rami- fican mucho; ahusadas ó fusiformes, las que parecen como huso; naMformes asemejándose á un nabo; engrosadas cuando se hacen abultadas; redondas 6 esféricas ; nudosas ensanchándose de trecho en trecho, juncos santos, ciperus jítncifolius, por ejemplo, G. 341 ; articuladas, formadas de artejos soldados entre sí; granujientas ó granosas, es decir formadas de granos ó cuerpecillos redondos mas ó menos numerosos y reproductores; troncado.s cwmxáo ^m ehivemo parece como roído; capilares, las que consisten en un hacecillo de fibras ó barbillas llamadas radículas ó raicitas, tales son las de las gramíneas, F. 10, y de muchos otros vejetales; las tuberosas ó tur- mosas : se llaman así á las que llevan tubérculos mas ó menos grue- sos saliendo de sus fibras, las batatas, G. 582; las papas, G. 622; á ellas pertenecen las globosas ó redondas, las nodosas 6 pendoleras , las moniJiformes ó dispuestas á manera de rosario ; las agamo7iadas ó fascicidadas y amanojadlas, la mellia tuberosa, G. 534, las cuales son compuestas de muchas piernas mas ó menos carnudas y pare- ciendo tuberculitos ; las didirnas, compuestas de dos tubérculos re- dondeados, el género orquis, G. 430; l&s palmeadas ó digitadas, cuando los dos tubérculos están divididos á manera de los dedos de las manos, algunos orquis; se llaman bulbosas cuando consisten en una ó en algunas cebollas reunidas, de cuya parte inferior salen las raices propiamente dichas y capilares siempre ; lirio sanjuanero, G. 452. Por la superficie se distinguen las raices en lisas, rugosas, tu- berculosas y anilladas, según si la tienen limpia, cubierta de arru- gas, de proeminencias dispersas ó de eminencias circulares. Nunca jamas las raices son verdes en su estado normal, pero pue- den tomar este color en las partes espuestas á la acción del aire ; ordinariamente son mas blandas que los tallos y carecen siempre de médula. Algunas tienen la propiedad tle echar retoños cuando sepa- radas del árbol su parte superior está en contacto con el aire du- rante bastante tiempo. Su epidermis difiere de la de los tallos por faltar siempre en ella las estomas. Plantas seudo-parásitas hay que tienen raices aéreas, la cuscuta por ejemplo, G. 585, perdiendo pronto la raiz primitiva y subterrá- nea, presentan en el tallo verrugas llamadas chupadores, que son otras tantas raices suplementarias destinadas á la absorción de los jugos que hallan dentro de los vejetales sobre los cuales se encara- man ; lio pierde sus raices lejítimas la margravia de flores en um- bela, G. (583; pero sus larguísimos tallos se apoyan fijándose por medio de infinidad de raices asidoras lo mismo en las piedras que en los árboles; muchos higuerotes ó higueras americanas, G. 111; la clusia rosea ó cupey, 8T4, echan raices aéreas muy largas que no principian á engrosar sino cuando han alcanzado el suelo, tales rai- ces se llaman adventivas, se las observa ordinariamente saliendo de los últimos nudos de la caña del mais, G. 172. Con frecuencia la vainilla echa raices adventivas muy largas; las raices de las orquí- ORGANOGRAFÍA. —r- DEL TALLO. 69 deas epífitas se han de agrupar en la clase de las aéreas, G. 440 443, etc. Dos son pues los uso?, á que están destinadas todas las raices en general : fijar las plantas y absorver las sustancias que se necesitan para su nutrición. Haj vejetales, sin embargo, que no tienen ó no necesitan raices , porque pueden yerificar la absorción por otros medios, y las hay cuyas raices son muy pequeñas y casi solamente destinadas á sujetar los tallos. Otras veces sirven solamente parala absorción y no para fijar las plantas: tales son las de la lenteja de agua. F. 31. CAPITULO II DHL TALLO. El tallo es esta parte del vejetal que sale siempre del cuello de la raiz, de la cual es la continuación aérea, su dirección siendo pues siempre opuesta á la suya: tiene por objeto llevar las hojas, flores y frutos. Hay plantas cuyos tallos son tan cortos que parecen faltar, entonces se las llama acaules, mientras que las provistas de un tallo se dicen caulescentes. Los botánicos han repartido los tallos en 5 clases ó divisiones di- ferentes, á las cuales han impuesto nombres específicos : I. El tronco; se llama así al tallo leñoso mas ó menos grueso, mas ó menos largo y que se eleva á veces hasta 80 pies de altura, cónico, mas ó menos ramoso v que pertenece á los árboles ó á los arbustos, sean por ejemplo e\jobo, G. 276, 213, 270; el mamey. G. 876, 877, 295. vSa parte inferior ó base es siempre desnuda y simple, mientras la superior se va dividiendo y subdividiendo en ramas, ramos y rami- tas mas ó menos numerosos, los cuales á su vez se ramifican mas ó menos. Es cilindrico y mas ó menos cónico á la vez, ordinariamente duro y resistente, constituye las maderas de construcción, de car- pintería y de ebanistería y es susceptible con frecuencia de un her- moso pulimento; su color varia muchísimo, así como su dureza y su fuerza ó resistencia; esa ólase de tallo pertenece especialmente á los vejetales dicotiledóneos yes formado de dos partes bien distin- tas, cuya parte esterior ó cortical constituye la corteza y se com- pone de la epidermis, la capa ó envoltura corchosa, la envoltura herbácea y las fibras corticales ó liber que ocupan la parte interior y son contiguas á la parte interior leñosa ó madera, que es com- puesta del leño y de la médula. 1. La epidermis es una membrana delgada, algo diáfana, que cu- bre ó viste todas las partes de la planta, de las cuales se la puede separar con mas ó menos facilidad; esta membrana está formada de una parte esterior película delgada, continua y mas duradera, estendiéndose sobre toda la superficie vejetal, mientras la otra mas interior ó la epidermis, propiamente dicha y lejítima, se compone de celdillas justapuestas, formando una capa única y de un espesor 70 BOTÁNICA ELEMENTAL. uniforme. Se observa ordinariamente en la epidermis major ó me- nor número de aberturas ó boquillas organizadas, vitibles sola- mente con el lente, llamadas estomas^ que establecen comunicación entre la atmósfera j el parénquima mas superficial de las plantas en que existen y con cuyos intersticios corresponden, sirviendo así á la respiración y sin duda á la vez á la espiración de los fluidos que salen de los vejetales; son unas hendiduras ó aberturas ovales pro- longadas, cuya forma determina un rodete generalmente compuesto dedos células semilunares que se tocan por sus estremidades,y varia en las diferentes plantas, desde la circular hasta la oval tan estre- cha, que se aproxima á la lineal, y en un mismo vejetal varia tam- bién, según el grado de humedad de la atmósfera y la acción mas ó menos intensa de la luz solar. Lo que es un efecto higrométrico so- lamente, porque se efectúa también en pedazos de epidermis aisla- dos, bajo el influjo de iguales causas. Esos órganos no se encuentran indiferentemente en todas las partes espuestas al aire, y son mu- cho mas numerosas en las hojas, en especial por su cara inferior; su número varia muchísimo, según las plantas, y son tanto mas abun- dantes cuanto mas pequeñas; su disposición varia también mucho; en efecto, están ya esparcidas sin orden ninguno, ya dispuestas por series rectas, á veces esparcidas por trechos iguales ; otras veces pa- recen agruparse, etc. Pero si las plantas están sumerjidas del todo, no tienen estomas, pues les falta la epidermis organizada, cual cor- . responde á los vejetales superiores, ytampocolashay en las sencillas plantas celulares, donde quiera que vivan , los hongos, por ejemplo, F. 'Z, los liqúenes, F. 3. La cara inferior de las hojas de las ninfeas, aplicada en la superficie del agua, está desprovista de estomas, mientras la superior las tiene bastante numerosas, F. 91; el medio en que viven las plantas determina pues la presencia ó la falta de epidermis, y por consiguiente de los estomas. En los vejetales semi- vasculares, como las licopodíaceas y los heléchos, F. 6-5, cuya epi- dermis es distinguible del tejido vascular subyacente, comienzan á presentarse esos órganos, que faltan en las raices, los peciolos no foliáceos, los pétalos, los frutos carnosos, las semillas, etc. La epi- dermis de las raices difiere mucho menos del tejido subj- aconte que la de los tallos, y á veces esa diferencia desaparece del todo. La película epidérmica ó cutícula existe hasta en los vejetales despro- vistos de epidermis lejítima, y en los acuáticos : consiste en una membrana continua agujereada en los lugares correspondiendo con los estomas. Los progresos de la edad la hacen desaparecer, así como la epidermis misma, y quedan entonces solamente capas de un tejido celular endurecido, que viene á ser la epidermis de los troncos y ramas viejas. La dilatación que esperimenta la epidermis por el crecimiento de los órganos que cubre, llega á resquebrajarla, y si á esto se agrega su desecación por la acción atmosférica, se es- plicará con facilidad por qué se cae á pedazos en muchas plantas, sucediendo lo mismo en las capas celulares que van apareciendo en su lugar, sea por ejemplo la Péndula, G. 560; los Guayabos y otras Mirtáceas, (^.\\\2, 1122. 2. La envoltíira suberosa ó corcho de color mas ó menos moreno, ORGANOGRAFÍA. — DEL TALLO. 71 aveces se desarrolla mucho, pero ordinariamente está muy poco pronunciada j generalmente falta mas ó menos. 3. La envolttcra herldceay celulosa ó mesodermis áe co\ov\ev([e, suculenta especialmente en la estación en que la savia está en mo- viento, envuelve toda la superficie del vejetal y comunica con la médula por medio de los radios medulares, cuya parte mas interna está formada por las capas corticales ó liber que se hallan entre la parte celulosa, compuesta del tejido celular y la madera, mientras que ella está formada de laminitas aplicadas las unas á las otras, constituyendo el liber lejítimo, cuya capa interior se forma todos los años, de manera que las mas viejas son las mas esteriores. Se observan en las capas corticales los vasos por donde circula la sa- via, los que contienen los sucos propios á cada clase, llamados pro- pios ó lacUferos; en esa porción del vejetal es en la que se verifican la mayor parte de los fenómenos de la vida vejetal, y en la que se identifica el injerto con. el sujeto. 4. El leño ó madera que constituye la parte dura y sólida de los árboles y arbustos, sigue á la corteza y se divide en albura ó parte mas esterior, mas ó menos blanda y de ordinario blanca, y en ma- dera lejítima ó corazón cuyo centro está ocupado por la médula. La albura no es otra cosa sino la madera imperfecta, cuya capa mas in- terior se vuelve cada año madera, mientras que esteriormente se forma una capa nueva, volviéndose el liber albura, y así se efectúa el crecimiento de los árboles, por medio de una nueva capa ó cono que todos los años envuelve á los anteriores, tanto mas cortas cuanto mas viejos; esa disposición se puede muy bien representar con cartuchos de papel desiguales puestos los unos dentro de los otros, y con la base sobre una mesa y cuyo mas esterior y mas lar- go, por consiguiente, represente la última capa de albura formada. Los arcos que en el corte de un árbol representan cada capa leñosa, corresponden pues á los años que haya vivido ese vejetal; su núme- ro dará pues su edad. Todas las capas leñosas no son iguales, lo que proviene de la repartición mas ó menos igual de la savia organiza- triz ó cambium ; ordinariamente .las capas que corresponden á las ramas gruesas y á las raices muy desarrolladas son mucho mas es- pesas, lo que modifica mas ó menos la forma cilindrica del vejetal, sea por ejemplo la ceiba, G. 918. El aumento ó crecimiento de los árboles se hace pues entre la corteza y la madera ó en su punto de contacto por donde circuíala savia descendiente ú organizatriz, su- ministrando á la par los- elementos necesarios para la capa mas in- terior del liber y la mas esterior del leño ó de la albura. La médula consiste en una sustancia esponjosa compuesta de cé- lulas, cuyo tamaño va disminuyendo desde el centro hasta la cir- cunferencia, á la vez que se pronuncia mas su color verde, están llenas de sucos abundantes que faltan caííi en el centro, y gozan du- rante el primer año de mucha vida, que disminuye los años siguien- tes y no tarda en desaparecer del todo, y entonces es blanca gene- ralmente y á veces morena, rojiza, amarillenta, etc. Está contenida en un arco leñoso que constituye el canal medular, que representa una estructura particular en la parte en contacto inmediato con la 72 BOTÁNICA ELEMENTAL. médula y se compone de muchas tráqueas que se pueden desarro- llar, mientras su parte esterior está formada de vasos anulares, ra- yados ó puntiagudos, cu jo diámetro es mucho mayor. La médula so amolda siempre sobre la forma del canal medular, ordinariamente mas ó menos anííuloso y raras veces enteramente cilindrico. Las plantas herbáceas cuyo desarrollo es muy rápido y la vida muy cor- ta, son formadas solamente por la médula y el canal medular, que algunas veces toman un poco mas de consistencia. IL El astil ó estipe es cilindrico, nunca cónico , pero bastantes veces algo fusiforme, casi siempre sencillo y sin ramos, mas ó me- nos alto, derecho, coronado por las hojas y terminado por una yema que ocupa el centro de ellas, sean por ejemplo el cocotero, la pal- mera real, etc., G. 91, 95, 99, 101, 205; pertenece pues esa clase de tallo á los vejetales monocotiledóneos especialmente, y su estruc- tura difiere mucho de la del tronco; en efecto, su parte mas dura está en la circunferencia, mientras la mas blanda ocupa el interior; no tienen capas concéntricas distintas y la médula, en lugar de ocu- par el centro, forma toda la parte interior, pero atravesada verti- calmente por un sinnúmero de fibras mas ó menos gruesas, y anas- tomosadas entre sí, mas ó menos paralelas, dirijiéndose de la base hacia el vértice, de cuyo centro sale todos los años una vema nueva que aumenta así la altura del estipe ; en la parte esterior no se pue- de distinguir ninguna corteza lejítima, pero sí una zona mas ó me- nos espesa, muy dura, compacta, morena, formada de haces fibro- sos muy apretados, que corresponde á la madera de los troncos, cuya fuerza y resistencia posee. El estipe se observa también en ciertos vejetales acotiledóneos, los heléchos arborescentes por ejem- plo, (x. 53; pero en ese caso su estructura es muy diferente de la del astil de las monocotiledóneas; en efecto, cortado transversalmente se le ve reforzado hacia lá circunferencia por una zona leñosa com- puesta de diferentes trozos mas ó menos distantes y algunas veces unidos, cuyo tamaño y forma irregular varían mucho, y compuestos de hacecillos leñosos cuyo color es ordinariamente moreno, a' cons- tituyen una especie de canal medular conteniendo mucho parénqui- ma que representa la médula; al esterior de este anillo que Resulta de la aproximación de los hacecillos enteros ó de su reunión, pre- sentan ordinariamente la forma de una cinta, que, plegada ó encor- vada diversamente sobre sí misma, hace dibujos mas ó menos bizar- ros y elegantes ; se halla una zona celular cubierta por la epidermis durante la primera edad del vejetal, y mas luego por una envoltura dura que proviene de la soldadura de la base de las hojas que se han caido á medida que se ha ido elevando el estipe. III . La caTta consiste en un tallo, por lo común cilindrico, pero también algunas veces triangular, mas veces herbáceo (|ue leñoso : con mayor frecuencia hueco ó acanutado : sin embargo lo hay á ve- ces lleno, como en el maiz j en la caña de azúcar por ejemplo ; casi siempre simple y raras veces ramoso, como en el bambú, provisto de nudos y tabiques, cuando hueco, dispuestos á trechos caíi igua- les; de esos nudos salen hojas sencillas cuya base, ó mejor cuyo pe- ciolo se ha vuelto vaina; esta clase de tallo pertenece á las mono- ORGANOGRAFÍA. — DEL TALLO. 73 cotiledóneas, j en especial á las gramíneas y á las ciperáceas, G. 172, 324, 326. IV. El rizo7na ó cepa, se llama así á los tallos subterráneos, or- dinariamente horizontales, otras veces oblicuos, de cuyo estremo y de su cara superior salen hojas y tallos aéreos ó boj ordos, mientras que de su inferior salen raices son mas ó menos escamosos y con frecuencia marcados de anillos; son carnudos ó leñosos, cilindricos, cónicos, radiciformes, etc., sean por ejemplo elgenjibre, G. 339, 477; la yuquilla ó maranta, G. 480, 47*6, 341. V. El tallo lejítimo ó propiamente dicho pertenece á los vejeta- Íes dicotiledóneos ; se habrán pues de agrupar en esa clase todos los tallos que no vienen á colocarse en las divisiones anteriores. Es mas ó menos largo, por lo regular delgado y con figura de varita, sim- ple ó ramoso. Se llama herbáceo cuando blando y mas ó menos car- nudo, no vive mas que un año; pertenece pues á las plantas herbá- ceas ó anuales, la verdolaga por ejemplo, G. 1127 : la mostaza, G. 830. Se dice semi-leuoso ó sui-leñoso, cuando su base dura y vive algunos años, mientras sus ramas herbáceas se mueren y se renue- van todos los años; en ese caso se llama también Síil-fruticoso, siih- frutescente ó fruticuloso , y el vejetal á que pertenecerá tomará el nombre áe siií-frutice, mata pequeña ó matita; la salvia de Europa, G. 501: son raros en los paises cálidos. Lleva el nombre de leñoso cuando vive algunos años y se vuelve como madera, cuya dureza y estructura anatómica tiene; su tamaño y su altura varia mucho, pero no pasa de 8 á 10 pies lo mas y tiene 1 á 2 pulgadas de diáme- tro: su forma es muv variada, sea por ejemplo el cariaquillo, G. 550, 510. Pueden ser los tallos anuales, bienales y perenales ó perennes, como ja hemos visto para las raices ; se han impuesto á los vejetales perennes nombres especiales para diferenciarlos entre sí, atendien- do á la altura del tallo; en primer lugar vienen los árboles de que ya hemos tratado al hablar del tronco y del estipe, después los ar- bolitos, que se diferencian de los árboles solamente por ser mas ba- jitos y mas ramosos; los arbustos se ramifican desde la base y rara vez esceden de 5 á 8 pies de altura, los arhistitos son mas bajitos, pero enteramente semejantes, los frútices ó matas mas ramosos, saliendo algunos vastagos de la misma cepa y cuya altura no escede 3 á 4 pies; matitas ó sub-frutices son mas pequeñas todavía, y por fin las yerbas, cuyo tallo, cuando existe, tiene poca consistencia y nunca es leño. Atendiendo á la dirección, el tallo ha recibido los nombres de recto, de inclinado^ ohlícuo, levantado, si después de in- clinado mas ó menos hacia el suelo recobra la posición vertical: de- cumlente ó acostado, aplicado en la superficie del suelo, sin echar raices en él; tendido ó postrado, el que por débil está caido y solo tiene erguidos los estreñios; rastrero, cuando hallándose tendido enraiza por sus nudos; cundidor ó est Conifero, cuando rastrero echa estolones ó hilos delgados prendiendo en la tierra á cierta distancia y produciendo en este lugar una nueva planta , sea por ejemplo el fresal, F. 132, — G. 744; reclinado 6 doblado, el que al elevarse de la tierra forma recorvándose un arco desde la base hasta el vértice; 74 BOTÁNICA ELEMEísTAL. decumbente ó tendido, al que sin formar arco alguno, después de ha-- berse elevado un poco se recorva prolongándose; ascendente ó in- cor forado, cuando por la base toca la tierra, enderezándose después de manera que el vértice mire al cielo; calizhajo, cuando derecho su vértice se dobla hacia la iieTVdi.: Jíeauoso ú ondeado, cuando for- ma zigzag; arrodillado, sarmentoso ó pareciendo sarmiento; trepa- dor, el que se encarama sobre algún cuerpo, mediante órganos asi- dores ó raices aéreas, sean por ejemplo laparra, G. 818; el bejuco de jabón ó de sopla, G. 847 ; la margravia umbelada, G. 683; volu- ble, cuando sube en los otros vejetales, enroscándose constantemente sea de la izquierda á la derecha, como el lúpulo, sea de la derecha á la izquierda, los albójoles, los frijoles, etc., G. 1077, 1070. Se da vulgarmente en América el nombre de bejucos á los vejetales leño- sos, volubles ó trepadores que en los bosques primitivos de los paí- ses intertropicales y tropicales se estienden asombrosamente y pro- ducen las mas veces un efecto maravilloso. Según su forma, los tallos han recibido los nombres de cilindri- cos, la mayor parte de ellos son así: com2)rimidos ó ai^lastados, sin formar ángulos salientes por los bordes; ancípites ó de dos filos; triangulares ó tricuetros, los carices, etc., G. 339, 341 ; cuadrangu- lares ó tetrágonos, las labiadas, F. 76; pentágonos, hexágonos j po- lígonos, según tienen 5, 6 ó mayor número de ángulos: en el último caso se les llama solamente angulosos; acanalados, asurcados^ cuya superficie está señalada lonjitudinalmente con surcos anchos y hon- dos, provistos ellos mismos de surquitos; estriados ó rayados, cuan- do la superficie presenta surcos poco profundos y numerosos ; ^íííz-íiZ- tinto y denso; sedosos ó sedeños, con pelo suave, largo, lustroso, aplicado al tallo y no entremezclado; pelosos ó pe- ludos con pelo blando, largo, aproximado, no aplicado y distinto; afelpados, tomentosos ó botosos, cuyo pelo largo y blando está entre- mezclado á manera de fieltro ; lamidos ó lanosos, cuando el pelo es largo y rizado en abundancia y no suave ; hirsutos ó peludos, hirtos ó pelierizados, hisjñdos ó pelitiesos, cuyo pelo mas ó menos abun- dante, poco largo, duro y recto es mas ó menos apretado, las borra- jíneas, F. 66; picantes, quemantes ó pruriosos, cuando la picadura de los pelos que les cubren causa quemazón ó escozor, las ortigas, G. 249; el guaritoto, G. 134; aguijonosos, pinchudos ó erizados, cuando están provistos de aguijones, sea por ejemplo los rosales, G. 1151; la zarzaparrilla, G. 236, etc.; desnudos, es decir, sin ho- jas, escamas, ni zarcillos tampoco, como la cuscuta, G. 585; afíleos ó sin hojas: escamosos ó provistos de escamas, como se observa dia- riamente en muchas plantas parásitas; envainados, cuando están ORGANOGEAFÍA. — DEL TALLO. 75 cubiertos por las vainas de las hojas, las gramíneas y ciperáceas, F. 10, 11; empizarrados éhnbricados, escondidos por hojas dispues- tas amanera de las tejas de los techos de las casas; alados, glandu- losos, aterciopelados , etc. Se llama simple al tallo cuando no tiene ramos; al contrario, se llama ramoso cuando se va dividiendo en ramas mas ó menos nu- merosas, las cuales son simples ó se van subdividiendo á su vez en ramitas ; los tallos ramosos han recibido algunas denominaciones que indican su disposición; en efecto, se llaman fastijiados ó arra- milletados, cuando están formados de ramos que todos llegan á la misma altura; Mfurcados ó aliorqíiillados, cuando tienen solamente dos ramos ; dicCtomos, en ese caso los ramos se van bifurcando su- cesivamente, la siciliana, G. 397; trichtomos , cuando se dividen por á tres y siguen así sucesivamente los ramos, sea por ejemplo la adelfa, G. 656; prolíferos, cuando echan ramos solamente por el vértice. La disposición de los ramos sobre el tallo varia bastante y ha re- cibido nombres á propósito para espresarla. Son alternos, cuando saliendo de varios puntos del tallo tienen entre sí una distancia casi igual, las hojas siguen siempre la misma disposición : muchísimos vejetales los tienen así; opuestos, salen de dos puntos opuestos : en las labiadas son así, F. 76; xerticilados, cuando salen de tres ó mas puntos formando anillo en derredor del tallo: muchísimas rubiáceas están en ese caso, G. 732; dísticos, si están situados de dos lados opuestos en una dirección lateral ; diverj entes, se llama así á los que se apartan del tallo, formando un ángulu muy abierto y con fre- cuencia derecho; esparcidos, lo^ que salen de muchos puntos del tallo sin orden alguno : muchísimos árboles les tienen así; amonto- nados, cuando están aproximados por la base, como el naranjo, G. 977; recojidos, acercándose del vértice y afectando la forma pirami- dal: el sauce blanco, G. 213; caUzd ajos, inclinados, acorimlados, cuando llegan todos casi á igual altura; pendoleros , péndulos ó col- gantes, los que están doblados hacia la tierra: el sauce llorón, G. 213; patentes, estendidos ó aMertos, apartados los unos de los otros y mas ó menos horizontales; divaricados ó desparramados, cuando se estienden repentinamente sin dirección fija; horizontales, los hay doblados por adentro y otros hacia afuera del vejetal á que perte- necen. Los ramos inferiores están siempre mas apartados del tallo que los superiores y forman con él un ángulo mas abierto, y acaban por destruirse, porque loa superiores les quitan la luz y el aire que necesitan para vivir. Yemas, bulbos y tubérculos. — I. Yema, se llama así al botón escamoso que termina los vejetales y que encierra el rudimento de los órganos que han de desarrollarse para hacer el vejetal, sea mas alto, sea mas ramoso, etc., Uevantambien los nombres de ¿ciío^ydeoyoysellaman terminales cwanáo ^alan délas axilas de las hojas, fuera de las mismas axilas y hasta sobre las hojas, pueden salir, en especial siendocrasas, como en las de la yerba bruja, G. 677; pueden, mediante circunstan- cias favorables, desarrollarse yemas llamadas adventivas óforttiitas. Las yemas normales ó saliendo de un modo regular y de antemano pre- 76 BOTÁNICA ELEMENTAL. visto, faltan en las raices; pero no es así en las adyentivas, por que á veces aparecen en ellas. La yema encargada de una germinación de hojas que han de suceder á la axila, de la cual se ha producido, so- brevive naturalmente á ella, y cuando se marchita ó se desprende, se queda en el tallo en un estado estacionario hasta que llegue la estación en que ha de desarrollarse. En los paises cálidos en que es- tamos escribiendo estos renglones, pocos vejetales esperimentan ese intervalo de descanso, v en ellos está siempre sin peligro para la yema, que por causa de la temperatura no está provista de las en- volturas que tiene en los paises templados y hasta frios, de manera que sus primeras hojas son casi tan completas é iguales á las que han de salir en seguida; en ese caso se llaman foliáceas ; serán es- camosas cuando estarán provistas de escamas mas ó menos grandes, mas ó menos numerosas é imbricadas, algunas veces como barniza- das esteriormente por una sustancia resinosa, otras veces forrada interiormente por una borra mas ó menos abundante ; en los árbo- les tropicales las yemas están generalmente desnudas ; las hojas es- teriores que les forman presentan muy pocas modificaciones. Los te- gumentos ó las escamas de las ^^emas pueden ser pecioláceas , esti- puláceas , fulcráceas 6 foliáceas, denominaciones que se aplican á las yemas que visten; serán pues formadas por la parte inferior de los peciolos, ó por las estípulas, otras veces por las estípulas y el peciolo juntos, y en fin por el limbo solo de la hoja, mas ó menos metamorfoseado. Según su forma se llaman globosas, aovadas, oblon- gas, etc. Se distinguen en foliferas , floríferas j rnislas , según contengan hojas, flores ó ambas cosas á la par, lo cual se conoce de antemano por la forma mas prolongada que tienen las primeras. Lsl 2Jrefoliacio7i ó rernacion, que es la disposición del limbo de las hojas en el interior de las yemas, es susceptible de muchas modifi- caciones, y de tal manera están dispuestas las hojas, que ocupan muy poco lugar. Decandolle agrupa todas estas modificaciones en las tres divisiones siguientes : I"" 2)legadas: pueden estarlo de varios modos y se llaman entonces reclinadas, la parte superior hallándose doblada sobre la inferior, acercándose así el vértice de la base; con- duplicada, cuando la mitad derecha está aplicada á la izquierda, las estremidades y la nervadura no esperimentando nada; replegadas: están en ese caso dobladas al contrario, de manera que la parte su- perior se aplica á la inferior; plegadas algunas veces ordinariamente á lo largo de las nervaduras y á manera de abanico; 2° arrolladas, presentan también algunas modificaciones que se espresan con vo- cablos á propósito; se llaman pues convohitas, cuando arrolladas sobre sí mismas á manera de cartucho, su eje se queda recto; sn- perroliitivas ó soire- arrolladas, las que conservando derecha la cos- tilla, tienen arrollada una de las mitades hacia dentro y sobre esta la otra en sentido contrario, como en el plátano, G. 448; revueltas. cuando tienen los bordes arrollados hacia fuera sin que la costilla cambie de dirección: el romero, G. 500; emnieltas, las que lo están lijeramente; circinadas, cuando están arrolladas sobre su eje de ar- riba abajo á manera de báculo de obispo, como los heléchos, F. 5. Tales modificaciones pueden combinarse ó complicarse la una DE LOS BULBOS Y TUBÉRCULOS. 17 con la otra, como por ejemplo, cuando un limbo plegado está recli- nado sobre el peciolo, etc. Considerando ahora las hojitas en la mis- ma yema, las unas respecto délas otras, se las ve dispuestas de varios modos, lo que ha necesitado que se les aplique epítetos á propósito para designar tales disposiciones; se dicen pues tolvadas, las que permaneciendo planas ó estando poco corvadas, se tocan por sus bordes, lo que es la vernacvni tolvada; enipizorroAlos ó recor godas, siendo igualmente poco corvadas, pero cubriéndose parcialmente unas á otras, y por los bordes en muchos casos, lo cual constituye la vernocion espiral, que corresponde (\ igual disposición en las hojas; V- indtiplicada, cuando las hojas, estando dobladas lonjitudinal- mente sobre sí mismas, se tocan por sus caras mas próximas, y tam- bién doblándose menos, lo hacen por sus bordes únicamente. Se llaman eqvÁtantes, las hojas cuando conduplicadas se conjen unas á otras, resultando la central ó primera dentro de la segunda, y esta dentro de la tercera, etc.; ohxolutas , semi- eqiiitontes ó semi- al)f azadas, siendo hojuelas igualmente conduplicadas que se cojen á medias, quedando la mitad de cada una dentro del pliegue déla otra. Como estas diversas maguerás de disponerse las hojas dentro de las yemas pueden presentarse también en todas las demás partes planas de los vejetales, como por ejemplo en las flores contenidas todavía en el botón , se deben conocer bien esos términos, porque se aplican á todos los casos en que tales disposiciones se observan. Las yemas de muchas raices perennes, óquizás mejor las de cepasy rizomas se llaman Ucriones, tales son por ejemplo los del espárrago, G. 246, del bambú, G. 324, etc. II. El bulbo ó cebolla no es otra cosa sino una yema, pero sepa- rada del vejetal, la cual, puesta en circunstancias adecuadas ó sem- brada, puede vivir de su propia vida y desarrollarse para producir un vejetal perfecto. Se compone de tres partes distintas, cuya su- perior está formada de escamas mas ó menos distintas y mas ó me- nos suculentas, destinadas á suministrar á la parte mediana, en la cual está dormido el ser que está pronto para despertarse y vivir, el alimento que necesita en ese primer período ; esa parte se llama escudo ó corona, y también disco ó platillo ; del bulbo y de su parte inferior salen las raices siempre fibrosas. Las varias formas de los bulbos los han hecho denominar globosos 6 casi globosos, aovados, prolongados, o'peonzodos , campanifor- mes, etc., adjetivos cuyo significado, siendo de todos conocido, no necesita esplicacion alguna. Se diferencian además entre sí según su estru(;tura, y entonces se llaman ttmicodos, cuando las escamas grandes y numerosas se envuelven enteramente : la cebolla común, F. 16; escamosos ó empizarrados, las escamas en ese caso son pe- queñas, numerosas é imbricadas, sea verbigracia el del jacinto y de muchas otras liliáceas, F. IQ ; sólidos ó macizos, las capas que les forman parecen íntimamente adheridas : la cipura de Martica, G. 467 ; atendiendo al número, se distinguen los bulbos en solitarios, hermanados , agregados y duplicados. De la axila de las escamas mas ó menos desarrolladas, salen del disco yemas ó búlbulos, que desenvolviéndose so vuelven bulbos lejítimos y se separan de la ma- 78 BOTÁNICA ELEMENTAL. dre, que se ha marchitado. En los bulbos sólidos, las yemas ó bul- billos salen lateralmente. Los bulbos se llaman simples, oníiUiples ó comptcesíos, en ese último caso están formados de algunas ceboUitas ó dientes, como verbigracia en el ajo común, G. 414. Los búlbulos no se diferencian de los bulbos lejítimos sino por su tamaño mucho menor y porque pueden salir de todas las partes del vejetal y con- siderarse como la transición entre la jema y el embrión, de que hablaremos mas luego. Los bulbos ó cebollas pertenecen siempre á las plantas monocotiledóneas. IIL Se ha, dado el nombre de tudérculos á unos bultos mas ó me- nos gruesos y carnosos ó feculentos, de aspecto, forma, color y ta- maño muy variados, que se presentan en la raiz de ciertas plantas, y merecen esa denominación solamente cuando están provistos de yemas, como las papas, G. 622; los que no presentan ojos, como las batatas, G. 582, no serán tubérculos lejítimos, pero sí raices tuber- culosas. Algunas veces los tubérculos lejítimos salen de la axila de las hojas, como sucede para con algunas dioscóreas : la gunda, G. 243. Órganos ACCESORIOS ó TRANSFORMADOS. — L Zarcillos: se llama así á unos órganos generalmente filiformes, herbáceos ó leñosos, simples ó ramosos, mas ó menos largos, flexibles y susceptibles de arrollarse en derredor de los cuerpos que se encuentran, provinien- do de la transformación de otros órganos, y sirviendo á los vejetales provistos de ellos para sostener sus débiles tallos y trepar por ese medio por encima de los árboles mas altos. Unas veces la estremi- dad de sus ramos sola está así modificada y el zarcillo es terminal; otras veces es el ramo entero y el zarcillo ocupa su lugar, como su- cede en las pasifloras, G. 1085; ya los pedúnculos se vuelven zar- cillos, ya es la costilla de las hojas, como en los guisantes, F. 130, S.-F. 1; en la parra y en los cisos, G. 815, 818, los zarcillos están opuestos á las hojas; en las cucurbitáceas, F. 141, salen del lado del peciolo; en algunas leguminosas nacen del ápice del peciolo ó del raquis ; en la zarzaparrilla, F. 17 , están los dos zarcillos situa- dos uno á cada lado de la inserción del peciolo; en las pasifloras, G. 1085, salen de la axila de las hojas. En ciertas plantas son mas cortos y se clavan á manera de garra en la corteza de los demás vejetales y se llaman entonces asideros, G. 683: el bejuco de palma. II Espinas: se ha dado ese nombre á puntas fuertes y muy pun- zantes que adhieren con la madera y provienen de la transforma- ción ya de los ramos, ya de las nervaduras de las hojas, ya de las stípulas endurecidas, etc. Son solitarias, apareadas, ó dispuestas por a tres ó á cuatro, etc., simples ó ramosas, iguales ó desiguales, etc. IIL Aguijones : no son otra cosa sino la continuación de la parte corchosa de la epidermis, no teniendo pues adherencia alguna con la madera, se despegan con facilidad, no ocupan en los vejetales un lugar fijo, están apartados ó agrupados sin orden alguno, y se pre- sentan, no solo sobre los tallos y sus ramificaciones, sino también sobre las hojas y los cálices, pero sin embargo, en especial en los peciolos y en las nervaduras : el solano mamoso y otros, G. 622; su ORGrANOGRAFÍA. — DE LOS ÓRGANOS, PALOS, ETC. In- forma general es la de un cono, algunas veces rectos, pero frecuen- temente á manera de gancho j de ordinario comprimidos, sean ver^ bigracia los rosales, G. 1151; son simples ó ramosos, solitarios ó agrupados y dispuestos en pincel, como en los cardones á cirios, F. 146. IV. Pelos: provienen de la epidermis y pueden hallarse en todos los órganos, sin eseluir las raices jóvenes, j también en las cavida- des interiores de algunas plantas; pero mas comunmente cubren los tallos, ramas y hojas, notándose que aun cuando falten en la cara superior de estas, se hallan muchas veces en la inferior, parti- cularmente sobre las nervaduras ó los nervios. Las plantas que cre- cen en parajes secos, ventilados y espuestos al sol están mas pro- vistas de ellos. Se llaman pelos lejítimos á los que son ásperos, tiesos, simples y aislados: las borrajíneas, F. 66; cejada, los que, muy distintos, son suaves y blandos; tomento, cuando las cerdas son numerosas y muy cortas; lanosidad : en ese caso las cerdas son largas, muy entrelazadas y parecen algodón; la7ia, cuando las cer- das, muy espesas y numerosas, son largas. Los pelos son simples ó ramosos, huecos ó llenos, cilindricos, alesnados, ganchosos ó en for- ma de anzuelo; hulhosos ó con la base abultada y á veces glandulo- sa ; cabezudos ó terminados por una cabezuela ; mazudos ó con la estremidad libre y á manera de maza ; cupidados ó con una cabecita en el ápice. Los pelos ramosos se llaman policéfalos, si tienen algu- nas cabezuelas; onalpiguiáceos ó anavetados, los que presentan dos ramas horizontales colocadas sobre una base glandulosa y cuyo con- junto parece una naveta pegada por su parte inferior y mediana, Gr. 948; ahorqidllados ó lifiircados, cuando parecen una Y; trifiir- cados, los que tienen tres ramas saliendo de un punto; dicCtomos, cuando se ahorquillan mas de una vez; deíitados, amanojados, si saliendo de las ramas inferiormente se elevan en forma de manoji- 11o; ver ti diados, cuando tienen antes de su punta las ramas dis- puestas en uno ó mas círculos ; apinceladjjs, ramificándose cerca de la punta y asemejándose á un pincel; agarahatados, si se terminan por dos ó mas ganchitos ; estrellados 6 radiados, cuando están dis- puestos á manera de estrella sobre la superficie de la planta; algu- nas veces los radios de tales pelos se soldán entre sí y la epidermis parece cubierta de escamitas, sostenidas por el centro á manera de escuditos, y se llaman en ese caso escamosos ó escudados ; monilifor- mes ó con figura de rosario. Se llaman pestañas, cuando algo tiesos y apartados los unos de. los otros, los pelos están situados ^obre los bordes de los órganos. La dirección de los pelos, aunque muy comunmente perpendicular, puede ser oblicua inclinándose hacia arriba ó hacia abajo : en ese caso se llaman retrorsos y adpresos ó arrimados; cuando están paralelos á la superficie, presentan igual- mente mucha variedad en su color y consistencia, y aunque por lo común sean lisas sus paredes, tienen á veces porción de granillos que les dá un aspecto particular. La existencia y las funciones de los pelos parecen en relación con las partes jóvenes y con el aflujo de los líquidos y la actividad de la evaporación, que es la conse- cuencia de él y la cual probablemente están destinados á moderar, 80 BOTÁNICA ELEMENTAL. raras \'eces se hallan en la corteza (1(^ las ramas adultas de los ve- jetal es leñosos. Y. Glándulas : so llaman así en los vejetales, por analojía con esos órganos de los animales, á unos aparatos conteniendo un líqui- do de naturaleza particular y distinto de los demás de la planta y siempre elaborado á espensas de los que abundan en ella. Pelos (jlo/iidulíferos: conservan á veces sin modiñcacion alguna una de las formas que acabamos de estudiar y difieren de los demás pelos so- lamente porque sus últimas células contienen un líquido, pero las mas veces están abultadas por el ápice. La transición de los pelos glandulíferos á las glándulas pediceladas especialmente es casi insensilde. De las dos modificaciones notables que pueden pre- sentar las glándulas lejítimas, la una consiste en ahuecarse y pre- sentar paredes formadas de varias células, y la otra en permanecer macizas, sin cavidad central, tengan ó ñola base adelgazada de mo- do que parezcan sostenidas por un piececillo en el primer caso y sentadas en el segundo. A veces están hundidas en la corteza, pero se quedan casi superficiales é inmediatamente debajo de la epider- mis, en cuya superficie sobresalen todavía algunas veces. Entre las interiores se han de notar las vesiculares, que contienen en paredes trasparentes un aceite esencial, sin color, y que seven con mayor fa- cilidad en las hojas de muchos vejetales, mirándolas interpuestas á la luz : las del naranjo, 917, de muchas mirtáceas, 133, y aparecen en- tonces mas ó menos numerosas. Otras glándulas hay que se llaman zasculo.res, consistiendo en espansiones del tejido celular epidér- mico destinadas á escretar algún líquido segregado : tienen vasos que comunican con el interior de las plantas^ y varían por su forma y tamaño, pudiendo ser también pediceladas y sentadas : se obser- van en los peciolos de algunas pasifloras, G. 1085; de bastantes eu- forbiáceas : el ricino, G. 144; el manzanillo, G. 123; en los ráqui- ces de muchas leguminosas, F. 130, S.-F. 3 ; de la tribu de las mimoseas, la guama, G. 1047. Entre las glándulas verdaderas y las vasculares, hay algunas que con dificultad pueden reducirse á cualquiera de esas clases, y otras forman el tránsito de las verdade- .rasó superficiales á las vasculares. Por simples modificaciones de las superficiales se tienen las verrugas, los pezoncillos ó glánd,ulas papilares, \o<& pezones ó glándulas utriculares. VI. Lentejillas , llamadas otras veces glándulas lenticulares, se hallan únicamente en las ramas de muchos árboles y arbustos dico- tiledóneos, y consisten en manchitas prolongadas algo preeminentes, mas ó menos abundantes, un poco de atención basta para reconocer- las. Al engrosarse las ramas se ensanchan las lentejillas, se con- vierten en estrías transversales, y la corteza de los troncos comien- za á resquebrajarse por ellas cuando produce corcho. ORGANOQRAFIA. — DE LAS HOJAS- 81 CAPÍTULO III. DE LAS HOJAS. § I. — CONSIDERACIONES GENERALES. Se ha dado tal nombre á unas espansiones membranosas, ordina- riamente planas y verdes, mas ó menos grandes, de tamaño, forma y figura muy variados, mas ó menos horizontales y de poca dura- ción ; se las puede muy bien con:^iderar como las raices aóreas ó tenerlas por los pulmones de los vejetales cuya superficie multipli- can de un modo asombroso. En efecto son á la vez los órganos de la re.>pir'acion, de la absorción ó nutrición y también de la exhalación vejetal. Se las puede definir unos órganos membranosos formados por la espan^ion mayor ó menor de un hacecillo de fibras vejetales saliendo de cualquier punto de la superficie de una planta, y cuyas divisiones, mas ó menos numerosas anastomosando entre sí, forman una redecilla llena de un tejido celular particular verde llamado parenquima. Cuando el hacecillo se prolonga antes de separarse sus libras constituye ana parte mas estrecha que se WsLmsL peciolo mien- tras que se da el nombre de limbo á la parte formada por sus fibras separadas, mas ó menos grande y sostenido por el peciolo de cuyo vértice sale ; las hojas así formadas se dicen pecioladas, la mayor parte de los vejetales las tienen así; cuando las fibras del hacecillo peciolar se separan las unas de las otras al salir de la planta la hoja que forman estando inmediatamente aplicada al vejetal se llama setitada ó sésil. El peciolo es simple ó ramificado, en cuyo caso se Wania peciolo co- mún ó raqicis y se da á sus divisiones y subdivisiones los nombres de peciolos parciales ó secundarios y de peciolulos. El peciolo , sea simple sea compuesto, ha recibido los nombres de cilindrico, com- primido, triangular, cuadran guiar, acanalado, unido, espinoso, aguijonoso, pubescoite, velludo, aterciopelado, afelpado, lampino, escabroso, liso, recto, enderezado , horizontal, inclinado, desnudo, alado, tieso ó blando, d.elgado 6 filiforme, espeso ó carnudo, etc., se- gún corresponda por su forma, su vestidui^a, su posición, su tamaño ó su conbistencia a la idea espresada por el sentido liter'al de los ad- jetivos calificativos empleados, y harto conocidos de todos para nece- sitar esplicacion. En el limbo ó parte constitutiva de la lioja se dis- tinguen dos caras, una base, un vértice ó ápice y una circunferencia ó mdrjen. De las dos caras una mira siempre al cielo ó está vuelta hacia el sol ó la luz y se llama superior, cuyo color es siempre verde mas ó menos oscuro, las mas veces es lisa, como barnizada, mas rara vez pubescente, con pocas estomas, de epidermis mas ad- herente, sirve especialmente á la exhalación y á la transpiración ; en efecto, está con bastante frecuencia cubierta de una sustancia como viscosa. La otra, que mira al suelo, se llama inferior, la epidermis TOMO 1 6 82 BOTÁÍMCA ELEMLxNTAL. que la cubre es menos acllierente, provista de major número de ea- tomas, nunca lustrosa, siempre de un color verde mucho mas páli- do, frecuentemente pubescente, peluda ó escamosa y sirve especial- mente para la absoicion. Se llama lase la parte por donde la hoja está pegada al vejetal sea mediata ó inmediatamente, y ápice la parte diametralmente opuesta; en fin se da el nombre de circunfe- rencia á la línea ficticia que delimita la figura ó la configuración de la hoja cu JOS lados se llaman lordes 6 rnárjen. Entre la epidermis que cubre las dos caras del limbo de la hoja se halla un espesor mavor ó menor formado por el esqueleto fibro- vascular y elparénquima, en que se observan vasos y tejido celular como en las demás partes del vejetal, pero modificado y apropiado á ese órgano ; los vasos son tráqueas que se pueden desenvolver, vasos anulares , rayados ó punteados , con fibras leñosas, y por afuera están los vasos propios y las fibras corticales. El parénquima de las hojas en que se verifica la respiración vejetal y por consi- guiente la descomposición química ó el análisis orgánico, si podemos espre^ar así nuestro parecer, del ácido carbónico está compuesto de dos rej iones ó capas, de las cuales una es superior y la otra inferior. En ambas las celdillas están en el estado normal y llenas de granu- los colorados en verde por el clorófilo, pero no tienen ni la misma forma ni la misma disposición en la una y en la otra. La organización de las hojas sumerjidas y que por consiguiente viven debajo del agua es muy diferente de la de las aéreas ; en efecto, les falta la epidermis y por consiguiente los estomas; están también desprovistas del esqueleto fibro-vascular reemplazado sola- mente por algunas células prolongadas . son pues únicamente com- puestas de parénquima. Al separarse los hacecillos de fibras forman las nervaduras 6 nervios mucho mas pronunciados por la cara inferior de las hojas que por la superior, en donde son raras veces notables, y su dispo^i- cion se dice nerxacion\ ordinariamente uno mayor y mas pronun- ciado sigue la dirección del peciolo cuya continuación parece, y lle- ga hasta el ápice de la hoja después de haber dividido tu limbo en dos mitades iguales por lo ordinario, se llama costilla; de sus lados salen otros ordinariamente simétricamente dispuestos, los cuales se llaman nervios secundarios ó solo nervaduras, las cuales, conti- nuando dividiéndose, dan lugar á divibiones terciarias que se dicen venas, y las divisionds de estas se llaman venillas y se anastamosan las unas con las otras. En las hojas de las plantas monocotiledóneas casi siempre las nervaduras salen junto á la base y caminan á lo largo rectas por lo común y aproximadas sin ramificarse sensiblemente, mientras que en las de las dicotiledóneas nacen unas nervaduras de otras, aun cuando algunas salgan juntas de la base, se van dividiendo y acaban por anastomosarse entre tí. Pero esa diferencia no es tan marcada en todos los casos, porque hay plantas monocotiledóneas cuyas ho- jas son enerves ó am nervaduras, mientras que en otras participan de la disposición que tienen en las dicotiledóneas ; el plátano, G. 448, cuyas hojas son provistas de una costilla muy pronunciada, de OKGA>;OtirRAFÍA. — DK LAS HOJAS SIMPLES. 83 la cual sale lateralmente una multitud de nervaduras horizontales; en los jaros, G. 15(3, 160 ; en los esmilaces, F. 17, las nervaduras se ramiíican y las venas se anastomosan. ^ Atendiendo á la nervacion , las hojas han recibido nombres par- ticulares para espresarla; se dicen pues penimrzias cuando de la costilla salen nervaduras transversales dispuestas á manera de las barbas de una pluma, las del plátano, G. 448; rethiervias, si tie- nen rectas y casi paralelas todas las nervaduras lonjitudinales pro- cedentes de la base : se dicen también en ese caso hasinervias : así están las de las gramíneas, F. 10 ; de las ciperáceas, F. 11 ; liliá- ceas, F. 16; curvinervias, cuando las nervaduras lonjitudinales se encorvan, como se observa en las del canelo, G. 352, y en ca.-i todas las de los vejetales de la familia de las melastomáceas, p. 136; se- gún el número de nervaduras se dicen tri, qídnque, septem 6 no- tam nervias; digitinemas %e\\vim?i\\ cuandoenlugar de.converjer las nervaduras diverjen, afectando la disposición de los dedos de la mano abierta; pellinervias cuando salen todas del ápice del peciolo é irradiando hacen tomar á la hoja la forma de un escudo : las de la capuchina, G. 843, y las de la yerba de cuarto, G. 1177 ; palmi- iiervias, en ese caso están dispuestas á manera de abanico : muchas palmeras, G. 204 lis\ la vid, G. 818; se á\c2n peda tmervias siem- pre que la costilla se queda sumamente corta. Todas las nervacio- nes no se pueden sin embargo referir con exactitud á estos tipos: hay hojas curvinervias cuyas nervaduras lonjitudinales no nacen precisamente de la base, sino de mas arriba, procediendo de la cos- tilla,'y entonces se dicen U'iplinerzms, qidntiiplinerdias, septnpU- nertias, etc., según el número de ellas._ La forma de las hojas depende de la disposición de las nervaduras, así como de ser simples ó compuestas; se llaman simples á las for madas de una pieza única mas ó menos grande, entera ó mas ó me- nos profundamente dividida, pero cuya división alguna, por profun- da que sea, no se puede quitar sin lastimar mas ó menos á sus vecinas, tales son las de todas las plantas monocotiledóneas y de muchísimos vejetales perteneciendo á las dicotiledóneas, las familias 14, 20, 51, etc.; la figura del limbo ó de la hoja simple varia tanto que puede decirse no existen dos especies de plantas que la tengan exacta- mente igual, y hasta especies hay cuyos individuos están lejos de ofrecer uniformidad entre sus hojas : el cadillo de jaquiman ó triun- feta heteroülla, G. 867. Las hojas compuestas, al contrario, resultan de un número mayor ó menor de piezas distintas en uno ó en algunos peciolos comunes y se puede quitar una de ellas sin lastimar de modo alguno las demás; e^as piezas se llaman hojuelas y se las ha de aplicar todo lo que es- tamos para decir de las hojas sencillas ; las plantas de la familia de las leguminosas son compuestas, muchas terebintáceas, etc., están también en ese caso, F. 130, 125, J26, etc.; para la formación de tales hojas el hacecillo fibro-vascular secundario al separarse de la costilla se comporta, relativamente á la costilla, del mismo modo que el peciolo lo hizo con el tallo ó la rama de donde ha salido, y ú la espansion del hacecillo no se hace sino á alguna distancia, entón- ^4 BOTÁ>;iCA ELEMENTAL. ees la nervadura toma el afspecto de una ramita adornada de hojitas, y ya habrá nacido la hoja compuesta. § II. — HOJAS SIMPLES Ó SENCILLAS. Consideradas según su posición ó inserción en las varias partes de los vejetales las hojas se llaman : radicales cuando salen del cuello de la laiz, sea las de la yautia, G. 160, 159 ; caulinares si nacen del tallo, las del rábano cimarrón, G. 156 ; del maiz, G. 172; ramales, las que salen de las ramas y ramitas. como se observa diariamente para la mayor parte de los vejetales dicotiledóneos ; en ünfloraleSy si, acompañando a las flores, han sin embaríro conservado su confi- guración y caracteres especiales, sea la albejaca, G. 516. Atendien- do á la edad del vejetal que las lleva se les lia dado los nombres co- mo sigue: seminales, cuando salen de la tierra en el acto de la germinücion ; en ese caso son formadas por los cotiledones ; primor- (lia'es las que se presentan inmediatamente después de las seminales y que tienen, sin embargo, la estructura anatómica comuna las de- mas, de las cuales se diíerencian por su figura siempre diferente; características, se llaman así á las de los vejetales adultos y que sirven para diferenciarles, las cuales han recibido por consiguiente nombres adecuados para espresar tu forma, su dispí^sicion, su ves- tidura, etc., á fin de liaceiles entrar con mayor facilidad en las des- cripciones botánicas. En atención á su disposición relativa en los vejetales que las llevan se las ha dado los nombres de opuestas cuando salen de dos puntos diametralmente opuestos del tallo ó de las ramitas : todas las labiadas, F. 76; el café, G. 738; verticiladas ó estrelladas las que opuestas están en número mayor que dos y forman así un anillo en derredor del tallo ó de la ramita: muchas plantas de la familia de las rubiáceas están en ese caso, como el bálsamo real, 732; borrerias, spermacoces, G. 704, 705, etc., serán vei'ticiladas por á tres, por á cuatro, por á cinco, etc., y entonces se dirán ternas, cuaternas, quinas, senas, octonas, etc ; cruzadas, así se llaman las opuestas cujos pares unos á otros se cortan en ángulos rectos, como se ve en algunos euforbios, G. 1^2; alternas, cuando salen de puntos que no se corresponden siendo á alturas diferentes, como en muchísimos vejetales, como verbigracia las cruciferas, las coles, G. 828; mostaza, G. 829; las anonáceas, el guanábano, G. 900: las borrajináceas, F. 66: dísticas son las alternas que forman dos carreras opuestas ; esparcidas ó dispersas, las alternas que á pri- mera vi.-«ta no parecen serlo por iiallarse próximas ó por haber abor- ta lo alguna; amontonadas cuando siendo muy numerosas casi cu- bren los ramos y parecen desordenadas; /(3^5czcw/«¿?¿í5 óen hacecillos las que los forman en apariencia por estar muy próximas ó por per- tenecer á ramitas muy corras [irocedentes de la axila de una de las hojas íjue entra en el hacecillo, como en los pinos; coronantes las que, e;^tando muy próximas en las estremidades de los ramos, for- man un manojillo; arrosetodas las alternas numerosas y aproxima- das formando ana roseta, como el maguey, G. 460, el aloes, (t. 413; OEGANOGRAFÍA. — DE LAS HOJAS SIMPLES. 85 ge^ninadas Ó meUizas : en ese caso dos salen del mismo punto, de las cuales la una es casi siempre mayor que la otra : el sacabuche, G. 618; trabadas ó reunidas son las opuestas que están unidas porslas bases : muchas rubiáceas están en ese caso, F. 62 ; perfolíadas, tras- pasadas, cuando una hoja única está atravchada por el tallo; escur- ridas 6 decurrentes cuando, sentadas, su base parece prolong-arse en el tallo con forma de alas, G. 1045. Seg"un su posición sobre el eje de que proceden se les llama hori- zontales, lo que es el caso mas común, ergtiidas, derech'is, vertica- les; arrirtiadas cuando lo e>tán al tallo ó ramo ; pegadas ó apoyado^- estando sentadas y unidas al tallo ó ramo por la caía superior de la base; empizarradas ó imbricadas cuando hallándose muy próximas se cubren unas á otras á maner-a de las tejas; entonces pueden pie- sentarse imbricadas de todos lados ó ser biseriadícs, triseriadas, cuadriseriadas , etc.; abiertas si estando separadas del tallo no lle- gan á formar con él un ángulo recto; oblicuas, cuando tal es su di- rección; end^erazadas cwdLiiáo han principiado por t-er inclinadas ú horizontales; encorradas formando un arco cuya estremidad libre mira hacia ariiba ; reflejas cuando se encorvan hacia abajo ; dobla- das las que se doblan hacia abajo; inflexa.s estando dobladas hacia adentro; colgantes cuando eatán como colgadas á causa de la debili- dad del peciolo; entueltas las que se arrollan hacia dentro ; revuel- tas arrollándose hacia fuera ; arrolladas si lo están v forman un hilo; imersOjS cuando pre.-entan hacia arriba el envés ; humifusas ó tendidas en la tierra; nadadoras', sumerjidasóqne no talen del agua. Atendiendo á su figura han recibido los nombres como sigue : linea- res, cuyos bordes casi paralelos distan muy poco; acintadas ó gra.- mineas las que teniendo sus bordes casi paralelos son mas anchas j largas que las lineares, G. 321 ; alesnadas las que siendo lineares se terminan insensiblemente en punta; cabelludas 6 capilares j filifor- mes las que son delgadas y largas : el espárrago, G. 246 ; aciculares 6 cerdosa^ las lineares, persistentes y pinchudas: los pinos, G. If 5; ensiformes ó en forma de estoque, teniendo sus boides paralelos al tallo, e.-tando acanalada poi* la base con las dos mitades aproxima- das mas arriba y por fin unidas por la superficie superior: la cipura de Martinica, G. 467 ; falciformes las que se a>emejan á una hoz ; espatuladas las que ^e parecen á una espátula ; oblongas ó pmlonga.- UprrÍ77ias ó mas ó menos profundamente divididas, y á veces lo son tanto y sus divisiones parecen tan inde- pendientes en algunos casos, que el tránsito de ellas A las compues- tas es casi insensible. Estos varios grados de división que pueden T)resentar las hojas simples se indican por medio de los términos adecuados siguiente» : dentadas las que presentan dientes agudos separados por senos oTitusos; festonadas si ios dientes al contrario son obtusos v los senos aírudos: aserrad.as, cuando los senos v lo.^; dientes son agudos é inclinados estos últimos hacia la punta de la lioja; duplicado-dentadas., duj)licadA>- festoneadas, duplicado-aserra- das, siempre que los dientes ó festones se hallan á su vez dentados, festoneados ó aserrados; incisas las que tienen dientes grandes y desiguales con senos agudos intermedios : rasgadas cuando tienen en la máijen recortes desiguales y poco profundos; sinuosas si los senos y las partes salientes son igualmente redondeadas y en ntí- mero indeterminado; sinuadas con escotaduras ó senos redondeados y en número dAterrainado; pandnri forra es ó en forma de violin, cuando á los estremos tienen dos grandes lobos redondeados y sepa- rados por dos senos laterales ; cvAehreadas ó serpeadas si la márjen forma tortuosidades; roídas cuando, además de ser sinuadas, tienen otros senos marjinales. pequeños, obtusos y desiguales; quebranta- dlas, gajientas 6 lobadas, si, teniendo su contorno mas ó menos re- dondeado, presentan senos agudos que sin penetrar hasta el medio separan partes salientes, también redondeadas, que se llaman ga- jos ó lobos; bilobadas, trilobadas, cuadrilobadas, qidnquelobadas . etc., según el número de lobos: pinaiilobadas. pahnatilobadas, pe- datilobadas , estando lobadas con la nervacion indicada por esas pa- labras; liratilobas si terminan por un grande lobo; liendidas si pre- sentando en su contorno partes salientes agudas, llamadas divisiones, lacinias ó tiras, no penetran mas allá del medio los senos i¿:ua] mente agudos que las separan : sea el ricino, G. 144; se dirán pues bífidas, trífidas, cuadrifldas, qmnqueflda.'i y por tin muUifldas ó recortadúi- 0RGA?íOGRA.l''ÍA, — DK LA8 HOJAS SIMPLES. 87 mas, según el número de tiras que tengan, sean pocas ó muchas; pinah'fidMS ó almenadas , palmatífidas , peltab'Jidas y pedab'fidas, cuando afectan las divisiones, la disposición indicada; liradas ó de hechura de laúd, cuando, á pesar de hallarse hendida al través, di- fiere de la pinatífida por tener una gran porción terminal indivisa; Tuncinadas : no difieren de las pinatífidas en otra cosa mas que por estar dirijidas sus lacinias hacia abajo; pectinadas, cuando están hendidas á manera de peine ; MphiaUfidas , estando nuevamente hendidas las lacinias que ofrecen lateralmente; loxiniadas, biempre que están hendidas en tiras mas ó menos profundas que se subdivi- den de varios modos; partidlas se dicen las hojas cuando penetran mas allá del medio los senos que separan las divisiones, llamadas tan pronto lobos como lacinias y permaneciendo siempre unidas por la base ; bipartidas, tripartidas, cuadripartidas j onultipartidas, según el número de áivi&iones ; piíiatipartidas , palmatipartidas, pe- datipartidas, las que están partidas según la nervacion espresada por e^as denominaciones; hiplnatipartidas, tripinatipartidas cuan- do las divisiones, que presentan lateralmente, e^tán divididas una y otra vez; cortadas estando divididas de modo que tengan sus seg- mentos independientes unos de otros, aunque carezcan de rabillo : el berro, G. 830; trisectas, cuadrisectas, midtisectas, según el nú- mero de los segmentos; piíiatisectas, palmatisectas, pedatisectas y en fin liratisectas cuando el segmento terminal es grande; pestaTio- sas, cuyos bordes son provistos de pelo sedoso y paralelo; espinosas, aquellas cuya márjen tiene espinas; agudas las que se terminan por una punta delgada ; acuminadas, puntiagudas ó aguzadas cuando se van terminando gradualmente en una punta blanda; arrejonadas q mucronadas y mucroneas, las que se terminan de repente en una punta pequeña y recta ; cuspidadas cuando la punta que las termina es tiesa y corva; ^arcillosas ó terminadas en zarcillo; estipuláceas ó acompañadas de estípulas : las de las papilionáceas, F. 130, S. F. I; orejudas cuando hay en el peciolo, cerca de la base del limbo, unos apéndices foliáceos llamados orejas. Atendiendo á la superficie las hojas han recibido denominaciones adecuadas para espresarlo ; se dicen pues unidas, lampiRas, lisas, ásperas, pubescentes, sedosas, velludas, algodonosas , pelierizadas, híspidas, aguijonosas, es2rlnosas, pértusas ó agujereadas ; arrugadas, ampollosas ó abolladas, ondea- das, plegadizas y rizadas; lustrosas cuando parecen barnizadas; viscosas aquellas cuya superficie es algo pegadosa ; coloridas cuando .su color es diferente del' propio á las hojas; enerves ó desnerviadaSf si ningún nervio parece en su superficie; nerviosas ó nervícdas \í\s que tienen nervaduras salientes que se estienden de la base hasta el ápice sin ramificarse : muchas monocotiledóneas; trinervias las que tienen tres nervaduras principales; rayadas cuando están con mu- chos nervios poco pronunciados; venosas aquellas cuya superficie presenta muchas nervaduras poco salientes, muy ramificadas y anastomosándose las unas con las otras ; rugosas ó arrugadas cuan- do las nervaduras al ramificarse y anastomosarse cortan la superfi- cie en arrugas ; punteadas aquellas cuya superficie está provista de muchísimos puntitos sea opacos sea transparentes : los naranjos, Q . 88 b«jTÁMCA ELEMENTAL, 911 \ glandulosaa, cuando están provistas de glándulas; planas 6 llanas, cuyas dos superficies superior é inferior son llanas y parale- las ; acanaladas, las provií>tas de un surco á manera de canal dis- puesto á lo largo de ellas; c'ncatas cuando está un poco hueco el disco con sus bordes mas elevados ; conzexas aquellas cuyos bordes se acercan del peciolo; cuculí formes 6 acogolladas cuando los bordes se acercan por arriba \ plegadas ó plegadizas, cuando las nervaduras hacen sobre el disco partes mas salientes y otras mas hondas alter- nativamente y principiando al peciolo. Consideradas según la sustancia que las forma, las hojas se deno- minan: membranosas cuando casi sin parcnquima, son casi secas y transparentes; escariosas ó aviteladas las que parecen secas; aper- gaminadas si parecen pergamino ; cartáceas ó papiráceas las que tienen la apariencia del papel ; crasas 6 gruesas cuando la sustancia que las forma es bastante resistente y sólida : la sábila, el maguey, G. 413 y 460; carnosas ó pulposas las que á la par que espesas son jugosas : la yerba bruja ó de patria, G. 67'7 ; las hojas crasas se llaman según su forma como sigue : cilindricas cuando tienen esa forma geométrica, bien que el ápice se termine por una punta : la cebolla común, G. 414; ovoideas las que tienen la forma de un hue- vo; deprimidas aquellas cuyo disco es mas achatado que los bordes: comprimidas, achatadas y aplastadas, redondas y achatadas á la par; tricuetras ó de tres caras : el ajo común, G. 414; tetragonas 6 con tres caras; lingüiformes, alengüetadas ó olenguadas, las linea- res carnudas y convexas por la cara inferior; dolabriformes , las carnosas sub-cilíndricas en la base, aplastadas en la cima y que pre- sentan dos bordes, uno espeso y rectilíneo y otro ensanchado, cir- cular y cortante. En atención á la duración, las hojas han recibido las denominaciones siguientes: caducas cuando se desprenden y se caen á fines del estío : la mayor parte de los vejetales están en ese caso; deciduas las que se caen durante el otoño; marcescentes, mar- cedlas las que en lugar de desprenderse y de caer después de secas persisten pegadas hasta la primavera; siempreverdes, quedándose verdes dui'ante todo el año : en los paises tropicales é intertropica- les muchísimos vejetales están en ese caso. Son concolores las hojas cuando tienen igual color por ambas caras, y discolores, al contra- rio aquellas cuyo color es diferente por ambas superficies : la san- guinaria, G. 411 ; verdes : la mayor parte de los vejetales las tienen así; hlanquecinas las que tienen un color pálido que tira al blanco : abigarradas ó jaspeadas cuando son matizadas de varios colores. § III. — HOJAS COMPUESTAS. Se llaman así las hojas formadas de un número mayor ó menor de piezas sueltas ó de hojas sencillas pegadas de un peciolo común llamado raquis', se las ha dado el nombre de liojuelas, son sentadas ó pecioladas, llamando ^^do/í^/o á su peciolo, y afectan las mismas formas é iguales maneras de ser que las hojas himples que acabamos de estudiar, por consiguiente se les aplicarán iguales denominacio- ORGANO(tBAFÍA. — DK LAS HOJAS COMPUESTAS. 89 nes. Se dividen las hojas compuestas en las shnplehienle cryinpuentn,¡< ^ en las o'ecompv estas y por fin en las mas que recompuestas. 1. Hojas simplemente compuestas : en estas las hojuelas son in- sertas en un raquis simple y siempre único y ?e dicen, según su dis- posición en él : articuladas cuando hay una sola hojuela y que esté articulada en el ápice del peciolo : el naranjo, G. 9T7 ; conyugadas, ayugadas y apareadas aquellas cuyo raquis lleva en los lados y ca^i en el ápice un solo par de hojuelas ; binadas ó hermaneoda.s cuando las dos hojuelas están situadas en el ápice del raquis : íernadas, tri- foliadas ó sea de tres en ramOj, aquellas cuyo raquis lleva tres ho- juelas: los gandules, la picapica, G. 1054; digitadas ó axentalla- das las compuestas de cinco hojuelas y hasta mas saliendo del vér- vértice del raquis : el haobab, el castaño de América. G. 954, 950; pero puede indicarse el número de las hojuelas usando las califica- ciones de quinquefolioladas, septemfolioladas, omülifolioladas , y la disposición de ellas en algún caso se espresa por el término de pel- tado-digitadas ó umbeladas : cuaternodas ó de cuatro en ra-riia las que tienen dos hojuelas á cada lado en la estremidad del raquis. En todos los casos en que la hoja compuesta presenta sus hojuelas si- tuadas de uno y otro lado á lo largo del raquis, como en elzantoxilo clave de hércules, G. 2*29, 835, y muchas terebentáceas, G. 276. Se WsiXñdi pinada ó alaÁa. y es susceptible de varias modificaciones que se designan como sigue : se dirá pues oUernativ amenté pinada ó pinada con oposición, es decir, conyugada, si sus hojuelas son al- ternas ú opuestas, y en el primer cato puede ser bifoliolada, trifo- liolada, multifoliolada, etc., conforme al número de sus hojuelas, así como en el segundo íC7iiyugada, biyuda, triyugada,multiyugada, etc., según el número de pares que la forman \ pinado-trifoliada la uniyugada compuesta de un solo par de hojuelas laterales y de una terminal que le da el aspecto de hoja temada sin serlo rigurosa- mente, porque es menester para esto que las tres hojuelas procedan de la estremidad del peciolo; imparipinadas ó pinadas con impar son las conyugadas que terminan por una hojuela solitaria : el nogal, G. 140; paripinadas ]as que no tienen hojuela terminal: pinadas con interrupción ó interpoladas las que tienen hojuelas alteinativa- mente grandes y pequeñas; pinado^escurridas o pinado decurrentes son las que tienen alado el raquis por prolongarse las hojuelas sobre él, de manera que son hojas profundamente divididas mas bien que compuestas; articulado-pinadas cuando las hojuelas son articuladas sobre el raquis ; en esas hojas se observa el sueño de las plantas? : las varias senes, el tamarindo, etc., G. 1019, 1039. 2. Hojas recompuestas : se diferencian de las primeras porque su raquis, en lugar de tener hojuelas á cada lado, lleva peciolos secun- darios provistos de hojuelas por sus lados, de manera á constituir con ellas tantas ííojas compuestas Wamíid^s pínulas . que reemplazan las hojuelas en el raquis y forman así la hoja recompuesta que reci- be las denominaciones siguientes : pedaleas, pedarias y aped.adas cuando el raquis bífido lleva hojuelas situadas únicamente en el lado esterior de sus divisiones: higeminadas 6 dos veces hermaneadas, si cada uno de los peciolos secundarios que salen del vértice del raquis 90 BOTÁNICA ELEMENTAL. sostiene un solo par de hojuelas: el pitecolobio uña de gato, G. 1050 ; diternadas ó dos teces temadas, siendo tres los peciolos se- cundarios qué nacen del estremo del raquis y tres las hojuelas que hay en el vértice de cada uno; digitado-pinadas cuando del ápice del raquis t>alen varias hojas pinadas ó pínulas, como en la vergon- zosa, G. 288 ; pinado-cony ligadas ó Mnado-pinadas, pi/iado-íer7iadas- ó temado pinadas, pinado- cuaternadas ó cuatemado-pinadas , se'¿u.ii si son dos, tres ó mas las hojuelas pinadas que proceden del estremo del raquis ; lipinadas ó dos veces pinadas cuando del raquis salen lateralmente peciolos secundarios en número vanado, constituyendo con las hojuelas correspondientes tantas pínulas: sea el aromo, G. 296. 3. Se ha dado el nombre de mas que recompuestas ó swcompitestas á las hojas compuertas por lo menos bipinadas situadas por cada la- do del raquis, y se las ha denominado como sigue . trigeminadas ó tres xeces hermaneadas cuOindiO áe la estremidad del raquis salen dos peciolos secundarios y del vértice de estos otros dos terciarios con su par de hojuelas cada uno; internadas ó tres veces temadas siendo tres los peciolos secundarios nacidos del estremo del raquis, tres los terciarios saliendo del ápice de los secundarios y tres las hojuelas que aquellos sostienen: iñ\)[nsLáas ó tres veces pinadas cusináo del raquis salen lateralmente los secundarios é igualmente de estos los terciarios que llevan las hojuelas; decompiiestas si el raquis lleva otros raquises secundarios mas de tres veces pinados : el perifollo, G. 1135. CAPÍTULO lY ESTÍPULAS, BRÁCTEAS, FILLODIOS , ETC, 1. Estípulas. Se ha llamado así á unas producciones foliáceas y á veces escamosas que están de ordinario situadas á los lados de la base de los peciolos ó de la inserción de las hojas; pero en alg-unas plantas se hallan entre las hojas. Las plantas monocotiledóneas ca- recen siempre de estípulas que no se encuentran sino en una porción de dicotiledóneas, las otras faltando también de ellas, sin embaríro faltan con menor frecuencia que lo que se cree comunmente : en efecto á veces son tan pequeñas que para verlas se necesita del lente; otras veces no se las puede observar por causa de ser dema- siado fugaces ó demasiado corta su duración, sin embargo buscán- dolas con cuidado y en las hojas muy tiernas y hasta contenidas en las yemas prontas para abrirse, entonces se las halla en muchos ve- jetales que se creia desprovistos de ellas. Atendiendo al tamaño va- nan muchísimo; en efecto, con fiecuencia están reducidas á una puntita, á un hilito, á una escamita : otras veces se desarrollan de tal manera, que parecen casi hojas pequeñas con sus nervaduras, dientes, lóbulos y cuya base está estrechada y forma una especie d^ peciolo, de tal suerte que á primera vista se las puede confundir coa ÜKGrA.NOGKAbÍA. DE LAS BRÁí'TEAr-. 91 las hojas lejítimas. Haj familias numerosas, tales corao las malvá- ceas, leguminosas y rosáceas, en que jamás faltan estando notables bajo mas de un aspecto y sirviendo por consi.auienie para caracteri- zarlas. Son enteramente libres ó soldada? con el peciolo, y en ese último caso se Wñman peciolares : el rosal, G. 1151 ; caidhiares : el café, G. T38; laterahs se dicen cuando están situadas ú los lados del pe- ciolo, Y lurAlares las que parecen nacer de la pai'te interna de la base de las hojas, pero ordinariamente proceden del tallo en la axila de ellas : no muclias plantas las tienen así : pueden, como las laterales, rodear el tallo ó el ramo, según se observa en las hiíiueras, G. 111. cuyas estípulas caducas y membranosas, dando la vuelta completa, cubren enteramente las yemas. Son libres en casos análogos las es- típulas axilares periféricas, })ero hay otros en que se hallan adhe- ridas á la base de la cara interna del peciolo, como en los polígonos y romazas, G. 384, 241 ; son pues.e>,típulas envainadoras tvMilosas llamadas ocreas características de aquella familia y susceptibles de varias modificaciones de forma y de con>ihtencia que se espresan por términos comunes; las estípulas P7Ürn.,folráceas no son otra cosa mas que las axilares : estrafolidceffs son las que salen en el tallo ó en los ramos; i/iffirpeciaJares se liama:) íp< que perteneciendo á dos hojas opuestas al encontrarse las dos de caila lado se sueldan entre sí y forman así una sola intermedia á, los dos peciolos. Las estípulas son permanentes ó caducas. Además de las estípulas ya estudiadas hay plantas cuyas hojas compuestas llevan otras estípulas mas pe- queñas ó estipulillas acompañando á la inserción de los peciolulos en el raquis : las avichuelas, G. lOll; la consistencia de las estípulas varia mucho y no está siempre igual á la de la hoja á que corres- ponden; las hay con forma de glándulas, otras filifoi-mes sencillas ó ramosas, las hay también mas ó menos duras y hat-ta vuelta.s espi- nas, algunas se transforman en zarcillos, etc. Son solitarias, geini- ■nadMS ó mellizas, terticiladas, etc. En las hojas de las plantas mono- cotiledóneas la parte del peciolo llamada vaJna está con frecuencia muy desarrollada y rodea el tallo en un trecho bastante lorgo : el plátano, G. 448, las gramíneas, F. 10: en pstas últimas se i-epara bastantes veces al separarle el limbo de la hoja una especie de gor- guera frecuentemente membranosa y blanquecina, tan pronto ente- ra como franjeada ó partida, y las mas veces dividida simétrica- mente en dos partes laterales, la cual termina la vaina; e»e órgano se llama lígula y ha ^ido comparado á las ei^típulas. Pegada con el tallo en la mayor parte del contorno del tallo cuya dirección siguír la vaina, no se articula y la hoja no se cae antes de morir ; sin em- bargo en algunas orquídeas tropicales el limbo de la hoja se &epara de la vaina persií-tente : el cirtopodio de Anderson, G. 443. 2. Brácteas y de los f'rfjanos que forman. Se ha dado tal denomi- nación á unas hojuelas acomi)añando á las flores que de ordinario salen de su axiki, las cuales no son sino modificaciones de las hojas lejítimas de que difieren por ser casi siempre coloridas y muy raras veces verdes, tener su máijen casi >iempre entera, una forma y mas veces una consistencia diferente: se dicen bracteolas cuando pert^- 92 h<»táni(;a íñíJ'I'mkntai,. neeeii á laiiiiücacioiieá dei pedúnculo. Varían bastante en plantas di- lereiitej;, la figura y tamaño de las bráctea?;, bnjo ete punto de vis- ta, son muv curiosas las que tienen forma de capucha: sea la mar- gravia, G. 683, y suministran carácteies genéricos y específicos muy buenos 3^ muy útiles. En una misma planta se desarrollan las brácteas diferentemente, y siempre crecen mas las que no tienen flores en su axila, formando á veces una corona terminal, como en la pina, G. 46"i; se dicen xacíos cuando nada presentan en su axila y fértiles las que tienen flores, pero abortan con bastante frecuen- cia, de manera que las flores de muchos vejetales son desprovi:jtas de ellas. Son libres, como en las labiadas, F. "76; asoldadas entre sí y con el ovario como en la^ pifias, G. 4(32; su posición respectiva es })or lo común igual a la de las hojas de la misma planta, aunque bastantes veces las brácteas estén opuestas ó alternas, siendo las hojas verticiladas y opuestas ó verticiladas cuando las hojas son al- ternas. Las brácteas son persistentes ó las mas veces caducas y basta fugaces, por causa de estar ai t^culadas. Al reunirse mayor ó menor número de brácteas por la proximidad de los nudos de que proceden, constituyen conjuntos de aspecto diferente, que han reci- bido nombres paiticulares como si fueran otros tantos óiganos dis- tintos. El C'JlUcuIo resulta de un pequeño número de brácteas arri- madas al cá;iz de una flor, libres ó soldadas entre sí : muchas malvá- ceas, G. 959, 964, 962; el iiiv'lucroó gorguera se compone de pocas ó muchas brácteas muy abiertas, que se hallan á cierta distancia de una porción de flores : los euforbios, G. 132; la zanahoria, G. 1137. }il periclinio ó peri/orantio está formado de brácteas mas ó menos numerosas, dispuestas por séiies, mas ó menos escamosos ó aperga- minadas, aproximadas, imbricadas y verticales que rodean las fío - recillas reunidas para formar una flor compuesta, F. 59. Lacúpifla se halla formada por muchas brácteas empizarradas, que se han soldado y endurecido, como en las bellotas. El involucro es propio ó íinífloro cuando acompaña á una sola flor, como en la parcha, G. \^'6b ; común ó midtijloro el que corres- ponde á muchas flores ; el ei ingio, G. 1131 ; la yerba de cuarto, G. 1132; monlfílo 6 polifilo, según las hojuelas ó brácteas que lo for- man están soldadas ó libres ; óAJilo, trifilo^ tetrafilo, cuando tiene 2, 3 ó 4 hojuelas , universal es el involucro cuyas hojuelas presentan en su axila ramos que á su vez sostienen otros involucros próximos á las flores que se llaman parciales ó imi'lucrillos : las umbelíferas, F. 149. Puede ser el involuci'o simple ó doble, llamado liserial y también multiserial según está compuesto de dos ó de muchas hile- ras de brácteas; caliculado 6 re/orzado el que tiene en la base unas cuantas hojuelas muy disminuidas de tamaño : la achicoria , F. 119; empizarrado ó apiñado las brácteas cubriéndose en parte unas á otras; desparramado aquel cuyas hojuelas están muy abiertas y apartadas ; unifloro, bifloro, trifloro, multifloro, conforme al núme- ro de flotes que encierra; cilindrico, c'itico, ovoideo, ve/itricoso, etc. atendiendo á su figura : cuando es monófilo puede ser partido, hen,- dido ó dentado. 3. Fspata. En muchos vHetales monocotiledóneos hay una espe- FISIOLOJÍA. — DE LA Is'UTRICION. 93 cíe de zurrón que envuelve las ñores antes de abrirse y se llama e;^- pata ó garracha, formada por una bráctea única envolviendo en parte ó del todo la inflorescencia, como se ve en los jaros, G. 160, 158 bis, en el coco y palma real, G. 99, 91 ; algunas veces se divide en dos piezas ó valvas, por ser formada de dos brácteas distintas ó soldadas; en otros puntos mas á lo largo del espádice se hallan al- gunas veces por la base de las flores ó de los grupitos que forman brácteas mas pequeñas, que se llaman espátulas. La espata es uni- tahe, bkalre ó multixalve, según el númeio de piezas que la compo- nen aparentemente; uniflora ó muUíflora cuando envuelve una 6 muchas flores ; íiniversal ó parcial: el plátano, G. 448; carnuda, merabranosa, apergaminada, leTiosa, etc. La gluma es otra especie de esputa bivalve propia de las gramí- neas, que consiste en dos brácteas alternas aviteladas ó escamosas, colocadas en la base de las espiguillas, cualquiera que sea el número de las flores, F. 10. 4. Fillodio. Se llama así al peciolo dilatado y presentando la apariencia de un limbo, de manera que se le suele considerar vul- garmente como una hoja: el palo rayo , G. 1012. Se di&tingue del limbo porque en lugar de nervaduras ^secundarias penadas saliendo de una coí^tilla, está recorrido por algunas nervaduras longitudina- les repartidas por toda su superficie y caai iguales entre sí, desde la base hasta el ápice; otra diferencia tiene que consiste habitual- mente en ser situado en el tallo en mentido inverso á las hojas lejíti- mas, es decir que su plano es casi vertical en lugar de horizontal. CAPÍTULO V FUNCIONES DE LA NUTRICIÓN. Absorción, respiración , circulación , etc. Como ya lo tenemos di- cho algo mas arriba y también en el discurso preliminar, paj. 19, las raices, por medio de sus chupadores, sacan del suelo el agua mas ó menos cargada de sustancias minerales salinas y de ácido carbó - nico que necesitan; tal líquido, caminando por los laigos tubos ó vabOs que acompañan á la médula y por sus ramos y anastómoses , lleva consigo al pa^o lo que suministran las varias partes ú órganos por donde pasa y llega mas -ó menos pronto á las partes verdes ó pulmones vejetales, (jue á la par y al mismo tií^mpo ch^ipanen la at- mósfera los gases que han de necsitar y esas dos absorciones, aérea y terrestre, van verificándose simultáneamente y sin cesar, lo que con>tituye la vida vejetal. Eso supuesto, á favor de la influencia de ajentes físicos poderosí- simo.-, la luz que obra por sus i ayos químico y eléctrico á la vez, que son el v¡olác<''o y el vei'de , los cuerpos absorvidos, es decir el agua, el ácido carbónico, el carbui'O de hidrójeno, el amoniaco, etc.. están descompuestos, ó ([uizás mejor, esperinieutan reacciones mole- culares químicas ó metamorfosis muy variadas sucesivas y siempre í)4 BOTÁMCA ELEMENTAL. niiifiei'Oriiftiirias, de tal suerte que sus elementos, hallándose en pre- sencia V contacto inmediato al estado naciente, es decir, en el acto mismo en que al salir de una combinación para entrar en otra, es- tán libres, entonces obedeciendo á la fuerza vital ú organizatriz, se agrupan molecularmente y dan oríjen á la materia organizada j or- .Q^ánica á la par, y así de un modo insentibie, pero constante y con- tinuo, se van formando los varios tejidos que lian de constituir los diferentes órganos de estos seres: además de eso, estas reacciones, siguiendo entre los elementos, dan lugar á metamorfosis ulteriores que, ayudadas por el concurso necesario de los órganos correspon- dientes, producen las varias secreciones y escreciones vejetales. La savia pues, después de llegada á los pulmones vejetales, es de- cir, en las liojas, y de hallarse sometida como corresponde á la ac- ción vivificante del oxíjeno del aire, se vuelve mucho mas viscosa, aparecen glóbulos en ella : ya principia á organizarse ó á volverse líquido orgánico, que toma el nombre de cambio ó látex, habiendo adquirido propiedades nuevas que le hacen nutritivo y reparador; entonces bajando por los vasos de la corteza ó por entre la albura y el liber, lleva consigo los elementos necesarios para la formación de las nuevas cipas de liber y de albura que han de aumentar anual- mente el tamaño del vejeta); al paso y á la vez distribuye por donde se necesita los elementos necesarios para la nutrición y para reme- diar las necesidades y pérdidas continuas que está esperimentando la planta. La savia descendiente corresponde pues á la sangre arte- rial ó reparadora de los animales, cuyo papel llena para 'los vejeta- les, mientras que la ascendente encuentra su análogo en la sangre venosa después de recojidos los productos de la dijestion y antes de liaber suirido en los pulmones vejetales la hematosis. Sabido es que bajo la influencia de la luz solar mas ó menos di- recta, las hojas, descomponiendo en su parénquima el ácido carbó- nico absorbido por su cara inferior se apropian el carbono, mientras el oxíjeno, saliendo por su cara superior se derrama en la atmósfe- ra; lo mismo sucede á veces para con el agua, pero no siempre; en la oscuridad, al contrario, el oxíjeno atmosférico está absorvido y una proporción correspondiente de ácido carbónico se halla elimi- nada. Véa^e para mayor intelijencia y mas estensa esplicacion del particular el discurro preliminar, páj. 2*2. Los vejetales tienen so- bre el aire dos acciones diferentes y hasta inversas; la una es la que las partes verdes, con la iníiuencia de la luz , ejercen sobre ese fluido, mientras la otra se verifica desde el momento e,n que ha prin- cipiado la germinación de la semilla que haproducido el vejetal y siguiendo a>í sin interrupción en todas sus partes; en efecto, según el señor Garrean, las hojas durante el dia exhalan una cierta cantidad de ácido carbónico; en ese caso seria eso la lejítima respiración ve- jetal enteramente semejante á la de los animales, y consistiendo en la combinación del oxíjeno con los fluidos vejetales, para que se ve- rifique la hematosis vejetal, del todo semejante á la animal. Según los magníficos trabajos del célebre botánico A. Brogniard, la respi- ración de los vejetales que viven sumerjidos en el agua se hace de un modo análogo á la de los peces, sacando del agua el aire atmos- FISIOLOJÍA. — DE LA NUTRICIÓN. 'Jo férico (jue tiene disuelto, descomponiéndole de la misma manera que los vejetales aéreos y quedándose con su oxíjeno y devolviendo ácido carbónico al agua. La luz influye siempre sobre ese fenómeno: en efecto, á una cierta profundidad las plantas se vuelven pálidas y lánguidas. Por espiración ó emanación gaseosa de los vejetales se ha de en- tender el desprendimiento ó exhalación de los fluidos que no han sido utilizados y también el de los que provienen de las reacciones ó metamorfosis verificadas que están de sobra y por tal razón inú- tiles, ó cuya presencia y permanencia en el organismo dañarla al vejetal. Como acabamos de decirlo, todas las partes verdes de las plantas espuestas á la luz desprenden mucho oxíjeno, mientras que en la oscuridad dejan salir ácido carbónico y también ázoe y absor- ven oxíjeno. Las partes no verdes, como por ejemplo los frutos maduros, en las mismas circunstancias, nunca desprenden oxíjeno, pero sí ácido carbónico; la mayor parte de los vejetales viejos ó enfermos exha- lan ázoe casi puro: Discurso preliminar, páj. . Esta exhalación se verifica siempre, como lo tenemos ya señalado algo mas arriba, por la cara superior de las hojas y á la vez por todas las partes verdes. Escreciones : se deben considerar tres clases de materias así bo- tadas afuera ó eliminadas por los vejetales : 1° las que aplicadas á .^u superficie á manera de barniz parecen destinadas á protejerlos y por consiguiente tienen papel en la vida vejetal : son sustancias re- sinosas que por su presencia se oponen á la acción de la humedad sobre los tejidos : 2" las materias que demasiado abundantes para las necesidades de las plantas no están utilizadas, y entonces salen afuera por las grietas de la corteza: las gomas y resinas, verbigra- cia; 3** las escreciones lejítimas son las sustancias impropias á la nutrición, pero es muv difícil determinar cuáles están en ese caso: de las raices solas saldrían pues las escreciones verdaderas. (Véase el Discurso preliminar, páj. .) Bvaporcicion : la evapoi ación ó exhalación acuosa que tiene lu- gar por las partes espuestas al aire, constituye la fuerza mas pode- io^a de la ascensión continua de la savia en los vejetales, y se veri- fica casi enteramente por via de los estomates, aunque se haga por loda la superficie y esrpecialmente por las verdes, pero de un modo casi insensible. Es pues tanto mas pronunciada y mas activa, cuanto mayores son el calor y la luz; de noche se para enteramente. 96 BOTÁNICA ELEMENTAL. DIVISIÓN II DE LA GENERACIÓN O DE LA REPRODUCCIÓN NATURAL DE LOS VEJETA LES Y DE LOS ÓílGANOS QUE TIExNEN QUE DESEMPEÑAR ESTA FUNCIÓN S1.CCI0N I. — DE LOS ÓRGANOS DE LA GENERACIÓN. CAPÍTULO I GENERALIDADES Ó CONSIDERACIONES GENERALES. Los vejetales, así como todos los demás seres organizados, son capaces de reproducirse ó tienen poder para procrear otros seres idcnücos á ellos, y de ese modo se puede perpetuar y mantener el niaravilloto equilibrio de la obra maestra de la creación ; el impor- tantÍ!^imo fenómeno que constituye la generación se vei inca por fíiedio del concurso mutuo y pa&ivo de dos órganos especiales, que son el e^tambre ú órgano masculino 3" el pistilo ú ói-gano fe- rxionino, los cuales se suelen con muchísima razón comparar y asimilar á los correspondientes órganos en los animales. Véase mas arriba, páj. , lo que tenemos dicho sobre el particular. Se llama flor á la parte del vrjetal que contiene tales órga- nos sea reunidos, sea separados. Generalmente se consideran hoy día todas las partes que constituj'en las flores, aunque diferentes por las formas, colores y consistencia, como otras tantas hojas mas ó menos moditicadas, y se tienen pues las flores por un montón ó con- junto de hojas modificadas y amontonadas ó agrupadas en un eje acortado ó casi nulo; pero estas hojas, que constituyen las varia.^ paites de la flor, difieren de las lejítimas, no solo por la forma, por el color y por algunos puntos de su estructura íntima, sino también porque nunca jamás salen yemas de sus axilas, ni tampoco del eje qur3 las lleva, lo que constituye una diferencia esencial entre las ho- ORGANOGRAPHÍA.. — ÓRGANOS DE LA GENERACIÓN. 97 jas que forman las flores y las otras partes de la planta. La vejeta- cion de una ramita cargada de hojas habrá de seguir indeñnida- mente produciendo nuevas yemas si la muerte, el aborto ó alguna otra causa esterior no vienen á pararla; mientras la vejetacion de una ramit:i terminada por una flor se para naturalmente por causa de esa jema terminal que no es capaz de echar otra. Los Vejetales cuyas flores se ven y se pueden estudiar con mayor facilidad sin tener que valerse del lente de aumento, se Uarnan fa- nerógamos: sin embargo, este instrumento indispensable facilita muchísimo el estudio y hace visibles caracteres que sin él no se pueden averiguar: la mayor parte de los vejetales están en ese caso; al contrario, se llaman cript'') gamos aquellos cu^-a existencia de las flores ú órganos reproductores es mas bien sospechada y problemá- tica que claramente demostrada y averiguada perlas observacio- nes directas: en ese caso están los musgos, licopediáceas, F. 6; los heléchos, F. 5; los liqúenes, F. 3, etc.; pero esos vejetales tienen órganos de que trataremos mas luego, que son considerados como los análogos ó reemplazantes de los órganos reproductores lejítimos. En fin, se ha dado el nombre de dgamos, á aquellos en los cuales hasta ahora no se ha hallado ó descubierto ni órganos sexuales lejítimos, ni tampoco ninguno análogo : las algas, F. 1. La presencia de un solo estambre ó de un pistilo único, sin nin- gún otro órgano floral que le acompañe , basta para constituir una flor, incompleta por supuesto, pero capaz de cumplir con su objeto. Vulgarmente son los órganos que acompañan á los sexuales, sin te- nerlos en cuenta, que se consideran como la flor, por ser ordinaria- mente mas vistosos y adornados de los mas hermosos colores y tener las formas mas elegantes y á veces muy bizarras. Cuando uno estu- dia una flor completa ó la analiza principiando por el centro hasta la circunferencia, halla sucesivamente los órganos siguientes: 1° en el centro el órgano femenino ó pistilo , que se compone del ovario conteniendo los óvulos, del estilo y del estigma; 2" viene después el órgano masculino ó los estambres, que constan del filamento y de la antera, que contiene el polen; 3° en fin, la cubierta floral doble, que se compone de la corola y del cáliz, que raras veces está acom- pañado de un calículo ó involucro situado por su base, que tiene mas ó menos envuelta. Las flores son sentadas ó pedunculadas, es decir, que son insertas inmediatamente en el vejetal, sin órgano intermedio en el primer caso, mientras que en el segundo su inserción es mediata y se efectúa por medio de un sosten mas ó menos largo, de figura y ta- maño muy variados, que se llama 7J^f?/«i¿*:^?6»; es simple ó ramoso y sus divisiones se llaman pedicelos. El pedicelo se llama cpifAo cuando sale de las hojas, como en la yerba de hicotea , lim)iauthe- mum hmnioUianum, G. ^SS; los filantos, phyllaiithus uioriri, Gr. .149; caulinar ó tallino, cuando sale del tallo ó de los ramds, como sucede con el cacao, 923; axilar, el que sale do las axilas : el café por ejemplo, G. 138, y muchos otros vejetales, como el níspero, arjiras sapota, Gr. 635, etc. ; estraxilar, cuando sale por afuera de la axila de las hojas mas ó menos cerca de la inserción del peciolo, TOMO I 7 98 BOTÁNICA ELEMENTAL. termi'fial, si termina la raniita que lleva la flor; epirrizo, al que sale de la raiz : el genjibre, gengihre officinalis, G. 477, y cuando el pe- dúnculo sale del centro de las hojas radicales de las plantas bulbo- sas y otras, como el lirio sanjuanero, pancratium caribceu7n , G. 452; la bretónica de Puerto-Rico : leo'ia mitans, G. 755. Se llaman hermafroditas las flores que tienen reunidos en la mis- ma cubierta floral ambos órganos sexuales : así las tienen la mayor parte de los vejetales, sean el arroz, orriza sativa, G. 3*21; el aji, ca^ísiciim amumm, 620; el añil, indigofera aTñl,Gr. 1060, etc., y los vejetales que las tienen así se llaman también hermafroditas. Las flores que contienen el órgano femenino solo se llaman femeni- nas^ y masculinas las que están provistas solamente de estambres, y los vejetales que las llevan se llaman unisexuales; cuando las flores femeninas y masculinas se hallan en una misma planta se llama mo- noica, mientras que se ha dado el nombre de dioicos á los vejetales que tienen una sola clase de flor en un pié y la otra clase sobre otro individuo, como la lechosa , carica papaya, G. 204; el marunguey, zamia intermedia, G. 231; el dátil, phmnix dactilifera,G. 205; el Hmaiz , zea mais, G. 11%; elvicino , ricinus communis, G. 144; el cocotero , cocos micifera, G. 91 ; en fin, se han llamado polígamos á los vejetales cuyo mismo individuo lleva á la vez flores unisexuales, sea masculinas sea femeninas, con flores hermafroditas, ó ambas .clases á la vez : el mango, G. 274; el almendro, G. 270. CAPITULO II DE LA INFLORESCENCIA. Se ha dado esta denominación á la disposición general de las flo- res en el tallo ó ramas de los vejetales. Se la ha dividido en 4 clases .principales, que son como sigue : 1» la inflorescencia axilar ; 2* la terminal ; 3^ la mista, y por .fin la 4* ó anómala. § I. — INFLORESCENCIA AXILAR. Tiene lugar cada vez que las flores salen de la axila, tan pronto de las hojas como de las brácteas; las flores se llaman entonces axi- lares y pueden ser solitarias, como las del pedo de fraile, datura stramonium, G. 601; geminadas ó mellizas, como las del fisálid^ de las barbadas, physalis larhadensis, G. 618; verticüadas, las que están agrupadas muchas en las axilas de las hojas ó las brácteas opuestas, tales son las de la mayor parte de las labiadas : el leonitis nepetafolia ó molinillo, 523, 516. La espiga es un conjunto de flores que con brácteas ó sin ellas nacen á lo largo de un eje común, á veces desnudo por la base, como en el llantén, plantago majar, G. 394; puede ser cilindrica, aova- da, cónica, además de Jloja, compacta ó densa; se llama empizar^ ORGANOGRAFÍA. — DE LA INFLORESCENCIA. 99 rada cuando las flores caen unas sobre otras por razón de su proxi- midad, según sucede en el llantén. Entre las espigas deben colocarse algunas inflorescencias que han recibido nombres particulares por circunstancias cuyo valor no es suficiente para constituir clases esencialmente distintas, tales son : el amento ó trama, el espádice, que suele ser ramoso y se llama entonces támara : en las palmeras, cocos nucífera, G. 91 ; y en fin, el estróbilo ó piua antes de la fructi ficacion: son meras espigas modificadas, 'pero cuyos nombres deben ser conservados, porque espresan cada una la modificación particu- lar que le corresponde. El amento está articulado por la base y for- mado de flores unisexuales é incompletas, con las brácteas interme- dias, como en los sauces , salix alba, G. 213; el higuillo , artante adunca, G. 315; en el primer caso es femenino ó masculino, seguE ias flores que lo forman, y hermafrodito en el segundo: se le ha dado los nombres áe precoz, tardío, coetáneo 6 casi coetáneo, confor- me á la época en que aparece, relativamente alas hojas. El espádice tiene su eje carnoso, con flores unisexuales anidadas sobre él y está acompañado de una espata, como en los yaros, F. 8; es sencillo y su parte inferior está cubierta de flores femeninas y masculinas sepa- radas ordinariamente por nectarios, mientras que la superior, de ordinario desnuda, se prolonga en forma de, maza; las palmeras tie- nen también sus flores dispuestas en espádice, pero con la diferen- cia que comunmente es ramoso, con eje que se vuelve leñoso, en- vuelta en una ó algunas espatas leñosas y toma el nombre de támara; el maiz, entre las gramíneas, produce mazorcas llenas de fruto que deben su orijen á flores femeninas dispuestas en espádice, rodeadas de una multitud de espatas. La pina, en fin, considerada en su prin- cipio, es verdaderamente un amento de flores femeninas, cuyas ho- jas carpelares, pegadas y endurecidas, forman las escamas leñosas que se observan después de la fructificación. Las espigas de las gramíneas y de las ciperáceas, E. 10, 11, debe- rían distinguirse quizás con un nombre particular, aunque en apa- riencia se asemejan á las espigas lejítimas; pero del eje común ó raspa nacen lateralmente unos grupitos de flores llamados espigui- llas, constituyendo así espigas compuestas: la cebada verbigracia. El rachno difiere de la espiga en que de su eje principal ó común salen ejes secundarios 6 pedúnculos terminados cada uno poruña flor y son casi iguales en lonjitud, como la rivina humilis, G. 362; el corimho simple no es mas que un racimo cuyos pedúnculos infe- riores crecen lo bastante para que todas las flores formen una su- perficie plana ó algo convexa, como en el peral, y también so vuel- ven las flores racimos acorimbados. hapanoja se diferencia de las precedentes inflorescencias porque tiene muchos ramos subdivididos, que saliendo á varias alturas se «levan diferentemente sin llegar al nivel del eje primitivo, como las flores masculinas del maiz y de la lechosa, G. 172, 204; el arroz, G. 321; pero los ramos ó brazos de la panoja, en unas plantas pre- -sentan racimos, en otras espigas, corimbos, umbelas, cimas ó glomé- rulas, y de estas varias disposiciones resulta la gran variedad que ofrece esta inflorescencia y que se caracterizan por los nombres 100 BOTÁNICA ELEMENTAL. correspondientes. Es simple ó poco ramosa la panoja, otras veces ramosa; caMzhaja como en muchas gramíneas, recojida ó afretada, y tanto que se hace espiciforme, ó al contrario aUerta, divaricada, desparramada. El tirso ó toha no es otra cosa sino una panoja de forma aovada, cual se observa en la vid, (1. 818. Líi umbela ó parasol simple está formada por una porción de pe- dúnculos saliendo de un mismo punto; sostienen flores cuyo con- junto presenta ordinariamente una superficie convexa, como en el ajo, allium sativum, G. 414; se llama desnuda cuando en su base no hay bráctea alguna, y al contrario, espalada ó involucrada, te- niendo alguna espata ó involucro: llámase además paucifiora, muí- tíflora, floja, densa ó apretada, según las circunstancias, y aunque por lo común es convexa, no es raro que sea plana si los pedún- culos llegan exactamente á la misma altura. En la urahela com- puesta, al contrario, los pedúnculos ó radios nacidos de un mismo punto producen en sus estremos muchos pedunculillos, que forman- do umbelillas sostienen flores colocadas, poco mas ó menos, á la misma altura, y cuyo conjunto constituye la umbela compuesta, como en la zanahoria, dancus carota, en el hinojo, F. 1137 ; la um- bela es sentada ó peduncitlada, compacta, densa 6 rara, desnuda ó involucrada : todas estas calificaciones no necesitan esplicacion al- guna. La certula ó corona difiere de la umbela porque sus pedúnculos, aunque simples y saliendo del mismo punto, son desiguales entre si y llegan todos casi á igual altura : es casi la umbela simple de que hemos ya tratado. La cabezuela está compuesta de flores apenas pedunculadas ó sen- tadas sobre un eje deprimido y ensanchado, de modo que forman un conjunto esférico ó hemisférico : las flores de la sensitiva, mimosa púdica, del cují ó aromo, Tacheliafarnesiana, etc., G. 296, 294; la cabezuela puede ser ¿tor^íZít, aoxado-ohlonga, esipiciforme , será tam- bién desmida ó hracteada. La calátide ó receptáculo, esa inflorescencia que pertenece única- mente á las flores compuestas, F'. 59, y que consiste en muchas flo- recitas situadas en un crecido mas ó menos pronunciado del estremo del pedúnculo y envuelto en escamas ó brácteas mas ó menos foli- formes, el cual se llsima. receptáculo corMon, forantio, clinaníio, etc., cuyas modificaciones merecen ser señaladas y estudiadas, porque de ellas se sacan caracteres genéricos muy buenos : es cilindrico y delgado en algunas compuestas, en otras es oblongo, oviforme, có- nico, hemisférico, y por consiguiente tanto mas ancho cuanto mas corto ; algunas lo tienen convexo ; pero sea cual fuere su forma, y prescindiendo de las pajitas, pelos ó cerdas que tenga por alteración de las brácteas, puede presentarse el receptáculo punteado , hojoso y alveolar, después de caldas las flores conforme á su modo de unión con él. El Mpantodio ó cenantio puede hasta cierto punto considerarse como un clinantio, cuya cavidad se ha aumentado mucho, hasta contener las flores : es propia esa inflorescencia de las higueras é higuerotes, G. 111 : de las dorstenias, G. 167. Asi es que el higo, ORGANOGRAFÍA. — DE LA 1^'FL0RKSCE^XIA. 101 lejos de ser fruto, como se cree comunmente, no es otra cosa sino un receptáculo cóncavo, parecido á una copa, de la superficie inte- rior, del cual nacen muchas florecillas y que por la aproximación de sus bordes toma el aspecto de una pera ahuecada, y presenta un curioso ejemplo deesa inflorescencia, mientras que se halla abierto á manera de copa en la dorstenia, lo que demuestra las transiciones que ha sufrido ese pretendido fruto. § II. — I^•FL0EESCE^•C1A TERMINAL. La cima ó copa tiene lugar cuando las ñores terminan siempre los ramos, dispuestos del modo siguiente : el ramo ó pedúnculo princi- pal está terminado poruña flor, cuya base ó punto de inserción está acompañado de dos ó de mayor número de brácteas mas ó menos grandes, opuestas ó verticiladas, de cuya axila puede salir otra flor ó una ramita terminada del mismo modo, y va siíjuiendo así la ve- jetacion sucesivamente, de tal manera que esta inflorescencia con- siste en una serie de bifurcaciones sucesivas, terminándose siempre sus brazos poruña flor única, como el saúco blanco, saynhiícus vir- (/¿niana, G. 734. Tomará los nombres de corimM/orme , apanojada, espiciforme, racemiforme, escorp)ioidea, según el conjunto de cimas afecte una de estas disposiciones generales. § III. — lísFLOEESCENClA MISTA. El tirso : en este caso el eje central ó el pedúnculo principal se va ramificando de tal manera, que á primera vista parece un racimo enderezado y piramidal, cuyos pedúnculos son desiguales y dispues- tos de tal manera, que los de la parte mediana estén algo mas lar- gos que los demás, como en el mamoncillo , melicocca hijuga, G. 854; lavid,i/¿/¿5 lalrusca, G. 818. El corimho : en esta inflorescencia el eje común se divide y sub- divide muchas veces á diferentes alturas, y sin embargo llegando casi á la misma todas las flores, de manera que forman una superfi- cie plana ó convexa: es casi propia de las sinanthéreas, la salvia de las Antillas , coniza lohata, G. 782; á primera vista parece um- bela, pero difiere de ella por la inserción graduada de sus pedúncu- los y pedicelos. .§. IV. — INFLORESCENCIA ANÓMALA. En esta última clase se han agrupado las inflorescencias que no corresponden á las anteriores. A veces las flores salen opuestas á las hojas , entonces se llaman opositif olías, como sucede en muchas cucurbitáceas; otras veces sa- len por fuera de la axila de la hoja y mas ó menos cerca de ella, y se llaman en este caso extra-axilares. Son radicales las que salen de 102 BOTÁNICA ELEMENTAL. la raiz, como en muchas liliáceas : la amapola de las Antillas, ama- rillis piinicea, G. 455; el lirio sanjuanero , pancratium carihceum, Gr. 452: tan pronto se las halla soldadas con los peciolos ó saliendo le ellos, como situadas en las hojas, como va lo tenemos señalado ¿ablando de la disposición relativa de los pedúnculos. Todas las inflorescencias que se han distinguido no son tan di- versas unas de otras que sea imposible agruparlas bajo algún punto de vista. Considerando los grados de vejetacion que presentan, se pueden establecer diferencias muy marcadas , pero no suñcientes por sí solas para servir de base á una buena clasificación de ellas. Eoeper dividió las inflorescencias en definidas, determinadas ó ter- minales, j eni'idejlnidas, indeterminadas, laterales ó axilares, se- gún si el eje primitivo se termina ó no por una flor . pertenecen pues á la primera clase las inflorescencias que consisten en una sola flor terminal, llamada cima itnijíora, y todas las demás especies de cima, así como ala segunda todas las demás inflorescencias. En las inflorescencias definidas la evolución principia siempre por el cen- tro, siendo la flor terminal del eje primitivo la que se abre la pri- mera, V al contrario, en las indefinidas son las flores inferiores ó mas lejanas del centro las primeras que florecen ; la inflorescencia en aquellas se llama centrífuga, y en estas centrípeta. CAPITULO III PKEFLOKACION Ó ESTIVACIÜN, Los botánicos han llamado así á la disposición particular que las varias partes constituyentes de la flor todavía contenidas y encerra- das en el capullo ó botón afectan antes de la florescencia ó antesis. Tal disposición se observa por supuesto casi siempre en las flores de todos ó á lo menos de la mayor parte de los vejetales de la misma familia, ó mejor en las plantas de la misma tribu, pero siempre y constantemente en todas las especies de un mismo género, lo que suministra frecuentemente muy buenos caracteres. Se llamará xahada cuando se tocan las piezas sea del cáliz ó de la corola por los bordes, en toda su lonjitud, como en el achiote , Moca orellana, G. 890 ; se llama indnplicada siempre que las piezas con- tiguas, se junten por una porción de su cara esterna, como sucede en la clemátide, G. 417; reduplicada, siempre que lo hagan por una porción de su cara interna, como se ve en la corola de muchas umbeladas, F. 149. La torcida difiere de la valvada en que las piezas, sobreponién- dose circularmente, se cubren unas á otras en bastante ostensión, como en muchas apocíneas, malváceas, etc.: la adelfa, nerium olean- der, G. 656 ; la empizarrada es aquella cuyas piezas se cubren parcial y sucesivamente desde la primera ó esterior hasta la última ó interior, formando una espiral, como en la de las verónicas , las rosas, G. 1151; pero si las X3iezas son tan largas y anchas que se ORGANOGRAFÍA. — DE LA PEEFLOR ACIÓN Ó ESTIVACION. 103 cubren casi del todo, se la llama co7ivolutiva ; la qidncuncial se ve- rifica entre 5 piezas colocadas de tal modo, que dos se hallen al es- terior, dos al interior j la otra, cubierta en parte por una de las es- teriores, se sobrepone á una de las interiores, como en el cáliz de la rosa Y en el de la jara, G. 1151, 861: siendo de notar que en esta prefioracion forman las piezas del verticilo floral dos vueltas de es- piral, como corresponde á un ciclo de 5 hojas. Esta prefioracion es susceptible de algunas perturbaciones, particularmente en la corola: el estandarte ó vexilo de las amariposadas, que deberia ser una de las piezas interiores, se hace comunmente esterior y cubre á las dos esteriores, formando así la prefioracion llamada xexilar : el quin- clioncho, cajamis iicolor, G. 1015: una de las piezas esteriores, al contrario, se hace interior en algunas corolas labiadas y en varias personadas; esta prefioracion se llama coclear. La prefioracion, propiamente dicha, consiste pues en la posición relativa de las piezas de cada verticilo fioral, que como se habrá no- tado, puede ser diferente en cada uno de los que pertenecen á la misma fior; pero las piezas aisladamente también pueden tener una disposición propia que complique la prefioracion del verticilo cor- respondiente. Las piezas de la corola crecen tanto en algunas plan- tas, qu«e se arrugan irregularmente, vía prefioracion, sea la que fuere, se llama corrugativa, como en la amapola legítima, papaver rheas, F. 90; se llñma plicatwa si se doblan lonjitudinalmente por dentro, como en las campánulas, ó por fuera, como en algunos sola- nos; las del cáliz pueden estar arrolladas sobre sí mismas, formando así una prefioracion envuelta; los estambres en algunas plantas se hallan encojidos, encorvados ó doblados de fuera á dentro, como en el llantén, G. 408, cuja estivacion se llama impUcativa, etc. El botón organizado, como se ha visto mas arriba al hablar de las vemas, y cubierto por las piezas del cáliz, no siempre se abre por la separación de estas, puesto que hay plantas donde es tal su solda- dura, que solo rompiéndose el botón pueden salir al esterior los ór- ganos dentro de él contenidos : así acontece en la catalpa, G. 526, y en otras plantas, con la particularidad de formarse en algunas un opérenlo ó tapadera á consecuencia de la ruptura transversal del cá- liz. También las piezas de la corola están fuertemente adheridas entre sí por sus estremidades superiores en algunos vejetales, como la vid, por ejemplo, vitis labrusca, G. 818, de modo que no llegan á separarse. 104 botá:nica elemental. SECCIÓN II. DE LO^ ÓRGANOS ESENCIALES A LA GENERArjON VEJETAL CAPITULO I DKL ÓRGAKO FEMENINO Ó PISTILO. ,§ I. — GENERALIDADES. Como lo llevamos ja dicho mas arriba, este órgano ocupa siem- pre el centro de las flores y se compone de 4 partes bien distintas, á saber : los óvulos ó huevecillos que constituyen el embrión vejetal naciente ó rudimentario, con sus varias envolturas, siempre -ó casi siempre contenidos dentro de una cavidad particular llamada ovario, que constituye la parte mas inferior del pistilo y es el análogo de la matriz de los animales mamíferos, cuyo papel tiene.; en efecto, sirve para alojar el ser nacedero y para protejerle contra las influencias esteriores que podrían, sino matarlo, á lo menos estorbar y entor- pecer su desarrollo ; además de eso le suministra el alimento que necesita, elaborado como corresponde, por la placenta que lo recibe de la planta madre. El estilo, cuerpecito por lo común filiforme, mas ó menos largo, cuyo papel consiste solo en hacer comunicar el estigma, que está de ordinario situado en su ápice, con el ovario, de cuyo vértice sale ordinariamente, es pues el análogo de la vajina en los mamíferos; en fin, el estigma, óreano íílanduloso, de forma, tamaño, color y consistencia muy variados, sin epidermis y casi siempre provisto de un líquido viscoso, corresponde con la vulva de las hembras de los animales ó quizás mejor con el orificio vajinal, llamado vulgarmente boca de la matriz; su papel consiste pues en recibir, agarrar como al vuelo y á chupar , si se puede espresar así, el polen, llevado por el aire para que se verifique la preñez ó fecun- dación vejetal. Los huevecillos, el ovario y el estigma son pues las partes esen- ciales y necesarias, porque su falta hace las flores estériles é inca- paces por consiguiente de cumplir con su objeto, mientras que el estilo puede y hasta suele faltar algunas veces, sin que por eso re- sulte perjuicio para la fecundación. Según el número de pistilos que contienen las flores, se llaman monój illas , toijinas , tetro jiñas j políjmas ; se llaman is 'jiñas teniendo tantos carpillos como sépalos, anisójinas habiendo menos carpillos, y por ñn polijinas siendo mas los carpillos. El pistilo está aplicado en el ápice del pedúnculo sobre el torus, tálamo, receptáculo ORGAKÜGEAFÍA. — DEL PISTILO. — GENERALIDADES. 105 Ó asie'fito, que no es otra cosa sino el eje de la flor cuvo tamaño, for- ma, consistencia, etc., varían muchísimo. Cuando está muy pro- long-ado, formando así un sosten mas ó menos largo al ovario, ha recibido el nombre de carp^'foi'O y de gimforo. g II. — DE LOS HUEVECILLOS. Los hueve cilios contenidos en el ovario son solitarios ó muchos r I' situados sobre un órgano particular mas ó menos desarrollado, de donde proceden, llamado placenta 6 trofospermo, que les pone en comunicación con la planta madre y tiene su análogo en la placenta de los animales mamíferos. No siempre está unido el huevecillo á la placenta mediante un funículo ó cordoncito mnbilicado , llamado tsimhien podospermo , porque hay plantas donde falta, y por consi- guiente se halla sentado ; pero siempre tiene un punto por el que se verifica su unión con la placenta, llamado hilo ú ombligo; principia el óvulo por una eminencia celular que aparece en la superficie de la placenta, y crece pronto, tomando la forma de un pezoncito des- tinado á ser el nrcleo donde debe desarrollarse el embrión : poco después se observan por debajo del ápice del núcleo dos borde- cillos circulares, uno interno y el otro esterno, correspondientes á dos envolturas del huevecillo, designadas con varios nombres, y que Mirbel indica sencillamente con las áe primúaj secímdina, siendo esta la interna y aquella la esterna. El cordoncito umbilical está adherido á la primina; dentro de ella y pegada á su fondo se en- cuentra la secundina y el núcleo tiene su base fija sobre el fondo de esta otra envoltura. Así es como los vasos del cordoncito umbilical llegan hasta el núcleo, atravesando el hilo ú ombligo que correspon- de á la primina ó testa y en la secundina ó tegmen] la chalaza está situada en el punto de unión de la misma secundina con la primina. Superiormente presenta esta la abertura circular ya indicada, lla- mada exostoma ó micropila estertor, en oposición al nomljre de en- dostoma, ó micropila interior, que corresponde á la abertura de la secundina. Cuando el crecimieto del óvulo continua uniformemente en su contorno, lo cual sucede en pocas plantas, se conservan en línea recta el ombligo, la chalaza, la micropila esterna é interna y el ápi- ce del núcleo; entonces el huevecillo en que eso sucede se llama or- totropo : las pol!góneas,*F. 50. Por lo común el crecimiento no se efectúa con tanta uniformidad, de manera que se desvian mas ó me- nos los objetos señalados; en efecto, puede llegar á encorvarse todo el óvulo, de modo que el ápice de su núcleo se acerque al ombligo y entonces el huevecillo se llama camptótropoó canipulítropo, í^egun si se desarrolla igualmente por ambos lados, ó mas por el uno que por el otro, como se observa en las cruciferas, F.89; muchas legumino- sas, F. 130 ; otras veces se encorva solamente por la base el óvulo y se acerca al cordoncito umbilical hasta encontrarlo y soldarse con él, formando un conjunto; entonces el huevecillo se llama anatro- po. El cordoncito umbilical, cubierto por la primina en este caso, ]06 BOTÁNICA ELEMENTAL. suele notarse esteriormente, y toma el nombre de ligamento ó rafe la línea que forma desde el ombligo hasta la chalaza, que en el huevecillo anátropo no coinciden como en el atropo ó en los camp- tótropo j campulítropo. Hay además otras disposiciones interme- dias del óvulo, de manera que se observan huevecillos hemianátro- pos y anf {tropos . En cualquiera caso llega un momento en que se ahueca el núcleo del huevecillo, viniendo á orijinarse de ese modo el saco llamado tercÍ7ia, que desaparece ó se adhiere á la secundina ; pero en cambio suele agregarse otro nombrado cuartina y todavía otro que se dice quintina : este último constituye el saquito embrional ó onemirana del amnios constante y duradera, mientras que la cuartina, formada á veces al rededor del saco y después de él, es tan perecedera é in- constante, que no ha llamado la atención de muchos observadores. En la cavidad del saco aparece la vesícula emlnñonal ó iitriculo pri~ onordial, que desarrollándose por la adición de nuevas células, for- ma el emhrion unido al ápice del núcleo por un hilillo llamado 5?/^- pensor, hasta tanto que este desaparece, atrofiándose. No es dudoso tampoco que el embrión se nutre á espensas del tejido celular semi- fluido que le rodea dentro del saco, y la parte sobrante del mismo tejido que persit-te á veces después de estar perfectamente formada la semilla, constituye lo que se llama aUimieii, endospermo 6 peri- spermo. El huevecillo puede ser solitario ó único en la celdilla del ovario, la cual toma por esta razón el nombre de unioridada y se fija enton- ces de cinco modos en ella : puede hacerlo en el fondo del ovario, como en la ortiga, E. 39, y entonces el óvulo está derecho; si pro- cede del ápice ó de un punto muy próximo á él, se dice inverso ; se llama ascendente al que saliendo de una placenta axil ó parietal se dirijo hacia arriba; colgante, pendiente ó suspendido , si en iguales circunstancias se dirijo hacia abajo; se óice peritropo siempre que el punto de unión diste igualmente de los dos estremos del huevecillo; cuando el cordoncito umbelical, nacido del fondo del ovario, es muy largo y que el huevecillo mas bien parece suspendido que derecho ; dícese entonces que el óvulo está suspendido de un funículo derecho ó se le califica de reclinado ; pero puede alargarse el cordoncito um- bilical del óvulo ascendente, v entonces lo es mediante un funículo colgante. Siendo varios los huevecillos contenidos en una celdilla, todavía se observa bastante constancia en el modo como se hallan dispuestos, si su número no llega á ser indefinido, y mayor segura- mente cuando es corto ; así es que en las celdillas hiovuladas están muchas veces los huevecillos uno al lado del otro, y entonces se lla- man colaterales, ambos colgantes, ó uno ascendente á la vez que colgante el otro ; pueden también desprenderse á diferentes alturas y en este caso hallarse sohrejmestos. Lo mismo sucede cuando son tres los huevecillos colocados á la misma ó en diferentes alturas ; pero siendo omdtioruíada la celdilla, no pudiendo crecer con igual libertad los huevecillos, se dirijen hacia arriba los superiores, hacia abajo los inferiores y en el medio se desarrollan los demás, todos ellos comprimidos y por consiguiente angulosos en lugar de ovoí- ORGANOGRAFÍA. — DEL PISTILO.— OVARIO. 107 déos, á no yerificarse que siendo la celdilla muy larga estén sobre- puestos los liueyecillos como en las leguminosas j cruciferas, F. 89, 130. g III. — DEL OTARIO. La estructura anatómica del ovario revela su oríjen, puesto que presenta como la hoja un parénquima atravesado de hacecillos fi- ])ro-vasculares y revestido de epidermis. Las tráqueas se dirijen de lo bajo á lo alto, converjiendo en el punto de donde sale el estilo, y la epidermis esterior está provista de estomas como la cara inferior de las hojas, mientras que la epidermis interior, mas pálida ó blan- quecina, carece de ellas. Pero el parénquima. del ovario es de ordi- na.rio mas abundante y jugoso que el de las hojas, sin que en el mis- mo haya capas celulares bien distintas. En el ovario se distinguen el dorso, dirijido hacia la circunferencia de la flor, y el vientre que corresponde al centro de la misma, ambos con una juntura ó sutura mas ó menos pronunciada. El ovario compuesto es comunmente re- gular, sin embargo algunas plantas hay en que no lo es; pero al ovario simple le sucede todo lo contrario, porque estando formado de dos mitades de hoja necesariamente irregulares, nunca en rigor deja de presentarse irregular. Por esto, sin necesidad de mayor examen, puede tomarse por compuesto cualquiera ovario perfecta- mente regular, mientras que el irregular es en muchos casos sim- ple y en algunos solam.ente compuesto. Tanto el ovario simple como el compuesto son susceptibles de formas diversas que se espresan con los adjetivos calificativos siguientes: gloloso, aoTCido, elipsoi- deo, cilindrico, oUongo, etc.; comprimido ó deprimido el que esté aplanado de arriba abajo ó lateralmente. El ovario compuesto, se- gún la soldadura mas ó menos completa de sus carpillos, presenta lobos en número igual ó doble. Cuando el ovario está dividido en dos ó mayor número de celdillas, están estas separadas por tabiques que serán lejítimos ó espurios. Todo tabique lejítimo alterna nece- sariamente con los estilos, los estigmas y los lóbulos estigmáticos, lo cual no sucede jamás respecto á los espurios, cualquiera que sea su dirección. Por esto los tabiques que se observan en las cruciferas y también en algunas papaveráceas, F. 90, cuyas placentas parieta- les se prolongan hacia el -eje, hallándose colocados en el mismo pla- no que los e^tilos, jamás pueden tomarse por lejítimos. Los tabiques lejítimos son incompletos si no llegan al eje del ovario, y completos cuando lo alcanzan y son formados de dos membranas adheridas, y e.stán por consiguiente siempre verticales, y de ellos se distinguen los espurios incompletos, formados por las márjenes entrantes de cada carpillo, en que saliendo del eje del ovario no llegan á su cir- cunferencia y que llevan las placentas. Hay otros tabiques lejítimos también, pero cuya estension se limita á la parte inferior del ovario, de modo que este es multilocular interiormente y unilocular supe- riormente. El ovario se dice uni, M, tri, cuadri, quinqué, etc.; multilocvJar, 108 BOTÁísICA ELEMEISTAL. según el número de celdillas que tiene, las cuales se llamarán uní, li, tri, cuaclri y multioridadas, según el número de óvulos conteni- dos en ellas; se califica también de didimo, tridimo^ó de dicoco, tri~ coco, cuadricoco, multicoco, cuando la soldadura que reúne los dife- rentes carpillos del ovario ocupa un trecho muy corto, y á medida que se \a estendiendo mas la adherencia se denomina M, tri, cua- dri, quinqué y midticostado , en consideración á las divisiones ó proeminencias mas ó menos pronunciadas 'lue se observan esterior- mente. El ovario compuesto unilocular siendo un verdadero conjunto de carpillos donde cada cual tiene sus bordes soldados, claro es que llegando todos al medio, deben formar un eje colocado sobre el re- ceptáculo ó disco á manera de columilla, á cuyo alrededor parezcan colocadas las placentas, puesto que la de cada carpillo se halla sobre su correspondiente sutura ventral, y todas las suturas se confunden en el eje del ovario perfectamente multilocular, resultando ser las placentas axiles y hallarse unidos los huevecillos al ángulo interno délas celdas, como en las naranjas, G. 9'7'7, los hibiscos, G. 9*70, las malvas, G. 959. Pero separando los dos bordes de un carpillo aislado, suele llevarse cada cual la mitad de los huevecillos, como sucede en muchas leguminosas, F. 130; y de eso se puede inferir que las placentas axiles son generalmente dobles. No llegando á cer- rarse los carpillos en el ovario compuesto unilocular, se concibe que prendidos los correspondientes huevecillos á los bordes inmediatos de cada par de carpillos, resulten las placentas parietales é igual- mente dobles. Entre \síí> ^yUicentas axiles y las perfectamente ^;(2rz>- tales hay grados que corresponden á los que median entre el ovario multilocular y el compuesto verdaderamente unilocular; los tabi- ques incompletos sostienen placentas semejantes á las parietales, que se llaman casi parietales ó casi axiles, según si se aproximan á una ó á otra de esas dos disposiciones. La placenta central libre suele constituir un todo sin vestijios de partes distintas. Se llama ginohase á la columilla mas ó menos deprimida ó poco desarrollada, como se observa en las borragíneas y en las labiadas, F. 66, 76, situada en el medio de las cuatro celdillas del ovario, como si fuera continuación del receptáculo ó disco. Pero además de la ginobase puede existir un ginóforo debajo de ella, lo que se ve claramente en el escordio, porque generalmente tienen ambas cosas las labiadas y las ocnáceas, F. "76, mientras que solo presentan una ginobase las borraj íneas en general, F. 66. Las placentas están diferentemente desarrolladas en los ovarios de diversas plantas, y no es de estrañar que se llamen huevecillos sin placenta los unidos á las que sean muy poco notables, y por el contrario, placentas hay que son proeminentes, crasas ó caomosas, hállense enteras ó bilobadas. En algunas plantas son tan volumino- sas, que llenan las celdas, y. no por eso se hallan siempre adheridas en mucha estension á la parte que parezca producirlas : en el llan- tén, F. 67. Hay dos que parecen componer una sola central libre, porque se destruye fácilmente el tabique delgado que las separa. Kespecto á su forma han recibido las placentas proeminentes varias ORGANOGRAFÍA. — DEL PISTILO. — ESTILO. 109 denominaciones, tales como las de hemisféricas , elípticas, criiicas, globosas, etc., que la indican suficientemente. La disposición relativa del ovario con los demás órganos florales proporciona muj buenos caracteres diferenciales, de manera que ha necesitado palabras á propósito para espresarla: el ovario se dice pues libre ó supero cuando pegada en el fondo del cáliz su base, sea mediata ó inmediatamente, ocupa así el centro de la flor sin tener ninguna otra adherencia con sus demás partes constituyentes; mu- chas familias de plantas y hasta quizás la mayor parte de ellas lo tienen así, como la caña fistola, cathartocarpus fistula, G. 1005 ; el guingombo ó quinbombo, alelmosclius esculentus, G. 970; la be- renjena, solamtm herengena, G. 622; el borrajon, lieliotrojniírn artiericamim , G. 611; el arroz, orriza sativg,, G. 321. Se llama m- fero ó adherente al que en lugar de hallarse en el fondo de la ñor ocupa su parte mas inferior y tiene los otros órganos florales coloca- dos por su vértice; en tal caso está enteramente soldado por su su- perficie con la cara interna del tubo del cáliz que entonces es siem- pre monosépalo y cuyo limbo corona siempre el fruto maduro ; se observa así en el plátano, musa paradisiaca, G. 448; en las amomá- ceas, la yuquilla, maranta arií7icli)iacea,G.480; en las umbelíferas, el culantro del monte, eryngiífAti feticlum, G. 1131; en las rubiá- ceas, coffea aradica, G. *73S; en las narcíseas, el lirio sanjuanero, pancratium car'ibcBum, G. 452 ; en las myrtáceas, la pomarosa,/^?»^- hosa vulgaris, F. 133. Seini-infero el que no está enteramente sol- dado con el tubo calizinal y cuya mitad superior está por consi- guiente libre : las campanuláceas, el tibey, liiypohvGma longiflora, G. 687. Parietal, se dice así el ovario cuando muchos óvulos están pegados por la base en la parte interna de las paredes del cáliz que está casi siempre con figura de odre y cuya garganta es muy estre- cha y carga con los demás órganos florales, de tal manera que á primera vista parece infero: los rosales. G. 1151. El ovario es único y simple ó midúiple y compuesto ; sésil ó senta- do, otras veces estipitado ó sostenido por un piececiilo mas ó menos largo saliendo del fondo del cáliz : los alcaparros , capparis cinoce- phala, G. 883; el melembe, cleome pentaphylla, G. 825. Según su forma ó figura se dice el ovario cilindrico , redondo ó esférico, oblon- go, aovado, fusiforme, etc. Según su vestitura ha recibido los nom- bres de pubescente, afelpado, aterciopelado, lampiño, liso, áspero, glanduloso, espinoso, etc. » % IV. — DEL ESTILO. Como lo tenemos ya dicho algo mas arriba, este órgano ocupa las mas veces el ápice del ovario que hace comunicar directamente con el estigma ; sin embargo algunas veces sale de las partes laterales y hasta cíe la base del ovario, y en este caso se dice laterod, como en el icaco y en el fresal, F. 132. Revístele una epidermis que es con- tinuación de la del ovario, y aunque á simple vista suele parecer só- lido, con mas irecuoncia que hueco, pero siempre corre interier- lio BOTÁNICA ELEMENTAL. mente á lo largo de él un conductito desde el estigma hasta el ova- rio, en algunas plantas vacío y en otras relleno de tejido celular comunmente flojo, que deja numerosos espacios, siendo diferente del tejido propio del estilo. Tiene el conductito en sus paredes por- ción de celdillas salientes á manera de papilas, y llega un momento en que otras blandas y húmedas se prolongan á lo largo de él en forma de hilillos, constituyendo lo que se llama el tejido conductor de cuya separación resulta el estigma. Nunca el estilo simple tiene ángulos ni estrías en su esterior, siendo mas veces rollizo y otras comprimido , mientras que el compuesto puede presentar ángulos, estrías y hasta costillas mas ó menos preeminentes, como en la ca- puchina, tropcelum mo.jiis, G. 843. Si los estilos parciales de cuya unión resulta no se sueldan del todo en el sentido transversal, se llama costillado ó estriado; pero si la soldadura es completa será ro- llizo, lo que sucede siempre que corresponde á un ovario sin costi- llas. Es central y terminal el estilo compuesto en todos los casos y mas comunmente lateral que apictílar el estilo simple, pero á veces está situado tan bajo que se llama basilar. Muchos estilos pueden unirse por la base ó hasta mas arriba, formando en apariencia uno solo que se califica entonces de U, tri, cuadri, quinqué y multipar- tido en otro. Siempre que los estilos simples se hallan libres del todo ó parcialmente, pueden separarse unos de otros mas ó menos, y por consiguiente recibir las denominaciones de divergentes, abier- tos j revolutos, ó sesirejlexos; pero existiendo un solo estilo simple, puede doblarse al contrario hacia dentro y llamarse injlexo y hasta horizontal, según se observa en muchas leguminosas, F. 130. Sea simple ó compuesto el estilo varia bastante en cuanto á su dirección para que se le apliquen los epítetos de derecho, arqueado, flexiioso ú ondeado, levantado, inclinado, sigmoideo ó con forma de S, ganchoso ó en forma de anzuelo, circinado ó arrollado sobre sí mismo, torci- do. La forma del estilo es también bastante variable : en efecto, es g^meso ó craso en algunas plantas y filiforme en muchas, mas ó menos cilindrico de ordinario, otras veces cíí;ííco, alesnado ó subiila- d.o, ovoideo^ apeonzado, claviforme ó mazudo, emhídado ó infundi- huliforme , adelgazado, fusiforme, articulado, petaloídeo, etc.; es corto ó largo, pubescente ó lampiño; si se desprende el estilo poco tiempo después de verificada la fecundación se dice caduco y persis- tente en el- caso contrario, y á veces sigue creciendo y vejetando durante algún tiempo : se llama en tal caso acrescente : la clemátide de la Habana, clematis havanensis, G. 417 ; forma en el ápice de la silicua de algunas cruciferas un pico característico. Tiene ordina- riamente tantas divisiones ó lóbulos el estilo cuantas celdillas hay en el ovario ; lo mismo sucede para con los estilos múltiples ; sin embargo en las lechetreznas los estilos están divididos en seis rami- tas y no presentan mas que tres celdas los ovarios, lo que indica la bifurcación de cada estilo. Una flor puede tener pues sea un estilo único y simple mas ó me- nos partido hacia su ápice, correspondiendo tan pronto con un ovario único como con igual número de ovarios; otras veces, al contrario, un ovario único lleva en su ápice algunos estilos. Como ya lo tenc- ORGAIsOGKAFÍA.. — DEL ESTAMBRE. ESTIG:yíA. 111 D30S dicho establece paso el estilo entre el estigma y el ovario, há- galo prolongándose muclio ó poco, porque lo esencial consiste en que los cordones pistilares tengan comunicación para que la materia fecundante pueda penetrar hasta los óvulos. § Y. DEL ESTIGMA. Sobre el estilo, cuando existe, se halla el estigma, y en caso con- trario está sentado encima del ovario. Puede ser el estigma una no- table prolongación del estilo, ó consistir meramente en una porción de su superficie convenientemente modificada, y por esto se distin- gue en com'pleto y en superficial ; siendo completo, presenta forma propia y es terminal, liemisférico, globoso ó cabezudo, discoideo, se~ mi-lunar, oblongo, claviforme ó maziulo, cilindrico, cónico, alesnado ó subulado, ganchudo, capilar 6 filiforme , linear, etc. También pue- de ser agudo ú obtuso, mas corto ó mas largo que el estilo, mas an- cho ó mas estrecho que él. Si el estigma e& superficial, nunca podrá recibir calificaciones que lleven envuelta la idea de un sólido, ya el estigma superficial será terminal, como en las labiadas, F. 76, ó la- teral como en otras plantas ; en ese úliimo caso mira casi siempre hacia el centro de la flor c-on una hendidura cuyos bordes masóme- nos separados presentan la superficie estigmática, cuando esta no se halla entre los mismos bordes ó en el interior de la curvatura del estilo. Se llama lamelado el estigma cuya hendidura es muy corta y la separación de sus bordes formando una laminilla. En todo caso presenta el estigma un tejido celular generalmente flojo, prolonga- ción del tejido conductor del estilo con células alargadas esterior- mente en forma de papilas y hasta de pelos que no deben confun- dirse con los de los estilos, ó sin nada de esto, pero siempre empapado de un jugo viscoso, que mantiene húmeda la superficie estigmática. El estigma es simple, partido, hendido ó lobado ; en al- gunas plantas es peloso, piíbescente, aterciopelado , apincelado, etc. Los pelos que acompañan al estigma de las compuestas y de las campanuláceas, F. 57, 59, contribuyendo al acto de la fecundación, se llaman colectores; las lobelias y otras plantas tienen los pelos de- bajo del estigma formando un collarcito que se llama indusio, G. 687, 689. CAPÍTULO II DEL ÓRGANO MASCULINO O ESTAMBRE. § I. — DEL POLEN. El polen ó la materia fecundante ordinariamente pulverulenta de los vejetales está compuesta de una multitud de granos indepen- dientes j aislados. Mucha diversidad de forma ofrecen los granos 112 BOTÁNICA ELEMENTAL. polínicos en plantas diferentes, y no varian menos por las desigual- dades en la superficie que presentan á la vista ayudada de un buen microscopio : haj granos globosos, aovados, elípticos 6 elifsoídeos, cilindricos, trígonos, poliédricos, pezoncillosos. tul) er ciliados, graim- jientos, erizados, espimilosos , reticulados , punteados, etc.; pueden además tener pliegues lonjitudinales, como idivahien poros ú ósculos, y ambas cosas á la vez se observan en algunos. Por diminutos que sean los granos de polen, están lejos de ofrecer tanta sencillez como pudiera creerse y se ha pensado durante mucho tiempo : compó- ]iense de una, dos ó tres membranas sobrepuestas que rodean una cavidad llena de cierto líquido llamado /otnZ/íí, donde nadan los gra- nillos tenidos por fecundantes con algunas gotitas de aceite y á ve- ces granitos de fécula. Generalmente son dos las membranas (|ue tienen los granos de polen maduro, cuya esterna se llama eschime- nina y la interna eiidhipienina, según Richard : tres hay en los de muchas coniferas, F. 33, 34, y una sola en la de las asclepiádeas, F. 62, páj. 142; pero por una comienzan todos, aunque después presenten otra ú otras dos mas en su interior. La forma, color, des- igualdades y poros de la superficie de los granos de polen, se deben enteramente á su membrana esterior, transparente y desprovista de color si estando tersa y lisa no trasuda el líquido aceitoso, que se lo da amarillo ordinariamente y en varias plantas azulado, azul, rosa- do, rojizo, negruzco, etc. , La fovilla ó líquido que llena los granos de polen es algo espesa y contiene principalmente unos cuerpecillos á que se ha dado mucha importancia atribuyéndoles la acción fecundante ; granillos de estos hay que son esféricos y pequeñísimos, otros no lo son tanto y va- rian por su forma, que es esférica, elipsoídea ó cilindrica con las estremidades adelgazadas. Todos ellos están dotados de cierto mo- vimiento bastante notable, que algunos consideran como vital, pero que quizás mejor depende solamente de una propiedad general de la materia muy dividida. Es indudable que, sea por los granillos, por (>1 líquido en que nadan, ó por ambas cosas á la par, es la fovilla lo activo 3" fecundante del polen. La salida de la fovilla al través de las aberturas accidentales ó existentes de antemano en la membrana esterna del polen constituye la dehiscencia de este, determinada siempre por la acción de la humedad sobre sus dos membranas, que se dilatan desigualmente atravesando de la interna á la esterna, siempre menos estensible. Cuando esta no tiene solución alguna de continuidad, ni partes mas débiles que el resto, se rompe por el punto que la humedad reblandece á impulso de la membrana inter- na dilatada en la parte correspondiente é igualmente húmeda, que sale formando al esterior una ampollita. Pero por lo común los gra- nos polínicos tienen perforada su membrana esterna ó á lo menos adelgazada en' varias partes ; los poros, sin embargo, son mas bien puntos mas débiles que soluciones de continuidad, y las partes adel- gazadas forman generalmente pliegues hacia dentro, existiendo so- los ó con los poros, que también pueden estar sin pliegues. Con la humedad se inÜan los granos polínicos, sus pliegues desaparecen, mientras que los poros se hacen mas visibles en forma de circuliilos ORGANOGRAFÍA. DEL ESTAMBRE. — POLEN. 113 transparentes, esté ó no verdaderamente perforada la membrana esterna, que en algunas plantas conserva su consistencia menos en el contorno de cada poro, cubierto así por una tapaderita que al fin se desprende, v en tal caso el polen se dice operciilado. A medida que la humedad se introduce en los granos polínicos, seguramente por efecto de la endosmosis, la dilatación de las membranas se au- menta y la interna, como mas ostensible, sale al través de los poros ó partes débiles, formando otras tantas ampollas que al fin se rompen dejando salir á chorro la fovilla : esto es lo que sucede cuando se somete el polen á la acción del agua ; pero colocado sobre el estig- ma, sean como fueren los granos polínicos, no suele presentar mas de una ampolla en la parte que toca á la superficie estigmática, y esta ampolla, alargándose al penetrar en el estigma, toma el nombre de tubo polínico. El polen de las orquídeas y el de las asclepiádeas difiere mucho por su disposición de el de los demás vejetales: por esta razón de- bemos estudiarlo. En las orquídeas, F. 21, se hallan frecuentemente aglutinados los granos polínicos, formando una masa s'lida como cera, por eso tales masas polínicas se llaman ceráceas, y no es me- nos común hallar plantas de la misma familia, cuyos granos de po- len, sin estar confundidos, se encuentren pegados unos á otros por hilillos elásticos, de modo que forman masas pulverulentas ó gra- nujientas; pero la mayor parte de las orquídeas europeas tienen los granos de polen unidos cuatro á cuatro, como en los utrículos polí- nicos sucede, y forman cuerpecillos que, adheridos entre sí por una redecilla elástica, constituyen la sola m.asa lohüacla. existente en cada celdilla de la antera; esta masa sectil es mas ó menos ovoidea con su estremidad inferior adelgazada á manera de un piececillo llamado estípite, candicula ó prolongación filiforme, que se apoya en una glándula denominada retinácíclo. Los dos piececillos de las dos masas que hay en la antera proceden á veces de una sola glándula ; pero cada piececillo puede tener la suya particular desnuda ó cu- bierta por una capucha, antes epidermis del estilo, y también es procedente del mismo la glándula cuyo jugo, solidificándose, orijina el piececillo de cada masa polínica. Las asclepiádeas son bastante semejantes á las orquídeas por lo que toca á las masas polínicas, siempre compactas y parecidas á cera, que existen en sus anteras ; pero tienen un estigma grueso y pentágono de cuyos ángulos, entre cada par de estambres, nace un cuerpecillo ovoideo y cartilajinoso, igualmente llamado retináculo, de donde salen dos hilillos denomi- nados joro/o7¿^í¿c¿o?¿^5 la^terales ó piernas , que terminan en las dos masas polínicas inmediatas, cada una de diferente antera. En la sazón de su madurez ó de la fecundación el polen no tiene en general ninguna adherencia con el utrículo ó saquito que lo con- tiene : se desprende y se derrama en la atmósfera, que se lo lleva consigo cual nube vivificadora que va esparciendo la vida por el es- pacio; echado á la candela el polen se inflama á manera de la pól- vora con mucha facilidad y prontitud. TOMO I 114 BOTÁNICA. ELEMENTAL. § II. ANTEKA. Este órgano consiste, como lo tenemos ya dicho, en ana especie de saquito m.embranoso, de figura y tamaño muy variados, formado por lo comiTn de dos celdas y raras veces de una única, que de^pues de secretado ó elaborado por su superficie interna el polen, lo tiene guardado y como en depósito, hasta que llegado el momieiito en que se necesita, entonces se abre por sí misma y lo deja salir afuera para cumplir con su objeto. La antera en su totalidad ofrece una cara en la cual se repara un surco lonjitudinal mas ó menos pronun- ciado ; el dorso será pues la parte diametralmente opuesta ; tiene además lados ó hordes, una J)ase y un ápice, y se debe tomar en cuenta su lonjÜKd y su latitud, entendiendo por latitud la dimen- sión que va de uno á otro borde, pasando por el punto de apoj-o de la antera ; la lonjitud se estiende desde la base ha^ta el ápice, pa- sando también por su inserción. La antera se dice introrsa cuando su cara mira hacia el centro de la flor, y estrorsa, al contrario, si está vuelta hacia fuera; es sésil ó sentada cuando faltando el fila- mento, como suele suceder bastante á menudo, está pegada sin in- termedio ninguno; ordinariamente está situada en la parte superior ó ápice del filamento, que se termina sin debilitarse ni estrecharse, ó que al contrario se adelgaza articulándose á veces con ella ; se dice esta, en el primer caso, inmi'/cil, conlimia, adherida ó apoyada, y en el segundo móvil ó 'versátil, G. 1085. Sea la antera móvil ó in- móvil, puede estar fija por su base sobre el filamento, ó apoyada en el mismo por su dorso, hallándose fija por el ápice, por debajo del ápice, por el medio, por debajo del medio ó por encima de la base ; se dirá pues hasifja, dorsifja, apicijlja, etc. Por su figura se llama la antera globosa, oblonga, elíptica, aovada, snb globosa ó esferoidea, linear, lanceolada, ondeada ó meaudriforme, y además asaetada, arriñonada, cordiforme ó acorazonada, didima , tetra gona. Todas estas denominaciones habiendo sido ya esplicadas son bien conoci- das de todos, y por consiguiente no necesitan de otra esplanacion. Las celdillas son susceptibles de presentar, tanto en la punta como en la base, apéndices que consisten en cerdas, puntitas, cuernecillos ó crestas, y entonces viene á ser la antera en el ápice ó en la base bicuspidada, bisetosa, bicorne, unicorne. Las dos celdillas, en lugar de ser aplicadas la una á la otra, pueden estar separadas por un cuerpo mas ó menos largo y de forma muy variada, que se llama conectivo^ el cual está á veces prolongado por su base y otras por su ápice, y en este últim.o caso orijina sobre la antera un apéndice que varia por su tamaño, consistencia y forma : tiene la de una cerda plumosa en la adelfa, nerium oleander, G. 658; es ancho y peludo en la pervenca, G. 648; bractiforme en el pino, G. 105; siendo car- noso, está como truncado en muchas anonáceas, F. 95; tiene color y aspecto petaloídeo en los jonidios, G. 819; es membranoso en las compuestas, F. *76. Tanto por abajo como por arriba suele no pro- longarse con bastante frecuencia el conectivo hasta los estremos de la antera, y entonces, además de faltar los indicados apéndices, ORGANOGrRAFÍA. — DEL ESTAMBRE. — ANTERA. 113 quedan libres las celdillas en algún trecho por uno (3 ambos e-tre- mos, lo cual se espresa calificando la antera de lífldcb ó escotada por el ápice, de lifida ó escotada por la base. La prolongación del conec- tivo puede verificarse también á lo ancho, de manera que, alejando una de otra las celdillas, estén estas separadas por un travesano mas ó menos largo, como en las salvias, donde está articulado con el fi- lamento sobre el cual se balancea, sosteniendo una celdilla completa 7 otra abortada, G. 501; ese conectivo así prolongado entre las dos celdillas se llama distractil v no es siempre horizontal, pues que en algunas plantas toma la figura de Y, y entonces el filamento parece bifurcado: puede ser espolonado y por lo tanto la antera se llama también espolonad.a, como sucede á las dos que corresponden con el pétalo espolonado de las violárieas, F. 86. Por su figura se llama el conectivo oblongo, aovado, circular, semicircular, lunnlado, securi- forme. Dícese que es nido el conectivo cuando las celdillas de la an- tera parecen unidas inmediatamente, como en las gramíneas, F. 10, y según si la unión se verifica de costado ó por los dorsos, se llaman allegadas ix oimestas; además la parte superior del filamento ¡¿irve de conectivo muchas veces, como en los renúnculos, F. 98. Las celdillas son generalmente largas y estrechas, pero las hay de for- ma mas ó menos globosa y de otras que median entre esta y la li- near. Ordinariamente las celdillas son paralelas, pero, de las dife- rentes maneras como el conectivo las une y de las modificaciones que este esperiraenta, resulta que en algunas plantas, sean diver- gentes y Jiorizontales ó transversas, no siempre tiene dos celdillas la antera, en efecto es unilocular en las malváceas, F. 100, páj. 234; las poligáleas, F. 107; algunas veces es unilocular por causa de ha- ber abortado una de las celdillas, y en este caso su figura no es ja- más regular como en el primer caso ; á veces la antera es cuadrilo- cular, como en el aguacatero y otras lauríneas, G. 224; en fin es multilocular en el tejo. Las celdillas se abren por lo común lonjitu- dinalmente, separándose las dos valvas distinguibles antes de la de- hiscencia, según el surco que se halla en la cara; pero la hendidura no se estiende siempre á todo lo largo, de manera que la antera en vez de ser lonjitudinalmente dehiscente, puede serlo por el ápice, lia^sta el ruedio^ casi hasta la base ; á veces se abre por un agujero lateral y oblongo, otras veces por poros, uno correspondiente al ápice de cada celdilla, como en los solanos, G. 622 : se llama enton- ces biporosa por el ápice la antera y puede serlo también por la ba- se ; en las melastomáceas; F. 136, se abre por un poro único común á las dos celdas y la antera se dice uniporosa en su ápice ; otras ve- ces se abren por un opérenlo, como en el aguacate. Los estambres deben tenerse por imperfectos, así como por castrados ó estériles siempre que nada haya en lugar de la antera y existiendo sola- mente los filamentos; abortan á veces del todo los estambres, y en algunas plantas están reemplazados por unos apéndices de forma va- riable que se llaman estamínodios . Por lo común las anteras son libres, como sucede en la mayor parte de las flores, como las gramíneas, F. 10; las borrajíneas, F. 66 ; las mirtáceas, F. 133. Sin embargo algunas veces están sóida- 116 BOTÁNICA ELEMENTAL. das entre sí, como se observa en las plantas de la familia de la,s compuestas, llamadas por esta razón sinanthéreas ; en las lobeliá- oeas, F. 59, 57. Otras veces están soldadas con el órgano femenino, formando así una columna que se llama ginostemo, como en las or- quídeas, F. 27 : así sucede también para los ariátoloquios, F. 45, y las plantas que las tienen así se califican de ginandras. La antera es por lo común mas gruesa que el filamento que la sostiene. § III. FILAMENTO. Este órgano, que suele faltar bastantes veces, no es otra cosa sino el sosten de la antera y nada mas, mas ó menos largo, de ordinario delgado y cuya forma varia mucho y según ella se dice capilar, como en el arroz, orriza sativa, G. 321 ; filiforme, como en el clavel, en la exostema de muchas flores, G. 719 ; alesnado ó siihulado ; en vez de ser rollizo puede estar aplastado y notablemente en^^anc1lado y denominarse entonces plano, onemiranoso , comprimido, dilatado, petaloídeo, como en la ninfea, G. 416; en la caña de Indias, G. 4S1 ; cuneiforme, abovedado, triangular, pubescente ó lampiño; colorado ó amarillo, blanco ó pintado ; ordinariamente simple ó algunas veces con el ápice terminado en dos ó tres puntas, .y por esta razón se \\?í- msihfido y triciispidado el ajo común, G. 414. También se presen- tan en algunas plantas ciertos apéndices hacia la base ó h'.cia la punta, de manera que se ha llamado espolonado, apendiculado ó pro- visto de un diente ó prolongación en la base el romero, G. 500, el asi- lan de noche, cestrum nocturnum, G. 626: hicuspidado, bifurcado 6 aJiorquillado refiriéndose á la punta. En algunas plantas parece salir de una escama ó apéndice colocado por la parte interior del estam- bre, como en la simaruba, G. 864, ó por la esterior, como en la bor- raja, donde tiene la forma de un cuernezuelo, G. 672 ; y el filamento se dice, según los casos, alado, corniculado ó picudo. A lo largo del filamento pueden existir dientecillns ó nuditos y se Ihama denticii- lado, nudoso ó toruloso ; está articulado en algunas plantas y parece en otras arrodillado, porque se inclina de repente. Además en cuanto á su dirección se le distingue en recto y corvo hacia dentro ó enconado; corvo hacia fuera ó recorvado; será i?imh\en fie xuo so ú ondeado, torcido, colgante, ascendente, decumbente 6 recostado, etc., términos todos aplicables á los estambres en totalidad. El filamento es simple como en la mayor parte de los vejetales : el maiz, G. 172; la yerba mora, G. 622; el rosal, G. 1151, etc., ó compuesto y formado entonces por la reunión de un número mayor ó menor de filamentos sencillos soldados entre sí tan pronto por la base como por la mayor parte ó toda su lonjitud y formando así en el fondo de la flor uno ó algunos hacecillos ó falanjes que se llaman andr'foro, que es susceptible de varias formas, y entonces se dice cupiliforme, campanudo, tubuloso, etc. Algunas raras veces en vez de ser soldados entre sí son solamente mas ó menos unidos, ven tal caso se llaman aglutinados ó coherentes, lo que se aplica también á los estambres que. en el caso de ser -soldados los filamentos, se ca- ORGANOGRAFÍA. DEL ESTAMBRE. FILAMENTO. IIT lifjcan de monadelfos cuando forman una sola falanje, como en las malváceas, F. 100, páj. 234 ; diadeJfos si se hallan en dos hacecillos, como en el quinchoncho, G. 1065, y muchos vejetales de las legu- minosas, trihu de las aniariposadas, F. 130, S.-F. 1 ; en las poliga- láceas, F. 10*7 ; triadelfos, siendo tres los falanjes; en ñn poliadelfos cuando hay varios hacecillos ó andróforos, como en el azahar, G. 977, en el homalio racimoso, G. 1149. Varia muchíbimo el número de los estambres, y según si la flor tiene uno, dos, tres, etc., ó muchos, se denominará monandra, diandra, etc. y poUandra ; cuando tiene tantos estambres como pé- talos se llama isostemone ; siendo mas ó menos los estambres se dice ariüostemone^ distinguiéndose en diplostemone y 'polistemone, según si los estambres son en número doble ó mas que doble, y además en meiostemone si está igual al de los pétalos. Haya muchos ó pocos es- tambres, pueden ser iguales ó desiguales, lo que depende única- mente delalonjitud relativa de los filamentos; didinamos se llaman los estambres siendo cuatro con dos filamentos largos y dos mas cortos, como en la mayor parte délas labiadas: el molinillo, G. 523; tetradínamos siendo teis, cuatro largos y dos cortos : el mastuerzo, G. 833; pueden ser también iguales ó desiguales entre sí, sin haber recibido denominaciones especiales. Están colocados los filamentos en una sola hilera cuando su número no es mayor que el de los pé- talos ó sépalos, pero forman dos ó mas en caso contrario, y por eso se dicen los estambres íini, M, etc., midtis erial es ; á veces algunas hileras aproximándose mucho se confunden y parecen una sola. Pueden inclinarse hacia un lado y se dicen unilaterales, pero las mas veces son derechos y siguen la dirección de las envolturas flo- rales pudiendo ser iguales, mas largos ó mas cortos que ellas ; se dicen inclusos los estambres: el pedo de fraile, G. 601, cuando la corola ó el cáliz formando un tubo los tienen escondidos, y salientes cuando salen por afuera : la menta, G. 564. La inserción de los estambres y por consiguiente de los filamen- tos, cuando exi&ten, ó el modo con que están situados con respecto del cáliz, de la corola ó en fin del ovario, suministrando muy buenos caracteres distintivos, nos debe ocupar. Los estambres se insertan de tres maneras diferentes; hay pues tres inserciones diferentes, que se denominan como sigue : I'' hipo- jinica ; cada vez que los estambres se hallan pegados por debajo del ovario ó al disco que lo sostiene: en tal caso el ovario es siempre libre ó supero, como en las labiadas, F. 76 ; en las liliáceas, F. 16 ; en las gramíneas, F. 10; enlas apocíneas, F. 63, etc.— 2°Perijínica: en este caso los estambres están insertos sea mediata ó inmediata- mente en derredor del ovario, que puede ser tan pronto libre como parietal y hasta infero : en estos dos últimos casos están pegados los estambres en la garganta del cáliz y por consiguiente aparentan ser situados por encima del ovario, como sucede en los rosales, G. 1151 ; en las myitáceas, F. 133; las plantas de la familia de las poligóneas tienen el ovario libre, F. 50. Se dice epijínica la inserción cuando son insertos los estambres en el ápice del ovario infero, como suce- de para las umbelíferas, F. 149; las orquídeas, *21, etc.; en fin en 118 BOTÁNICA ELEjíENTAL. estos últimos años se ha admitido una cuarta inserción llamada MpO'perijín'iGa, y que llamaremos nosotros mista, porque participa á la par de la liipojínica y de la perijínica, como se observa en bas- tantes vejetales de la familia de las leguminosas, F. 130. Los estambres correspondientes á tales inserciones se dirán pues ]'''p6jirvOSj peHjinos, epíjinos é lú'po-peTijinos . SECCIÓN iir DE LOS ÓRGANOS ACCESOEIOS DE LAS FLORES Ó DE AQUELLOS CUYA FALTA NO ES OBSTÁCULO PARA EL CUMPLIMIENTO DE LA FECUNDACIÓN. CAPITULO P. Antes de pasar mas adelante es preciso mencionar unos órganos que suelen faltar bastantes yeces, pero cuya presencia, no muy rara en las flores de muchas plantas, suministra con frecuencia buenos caracteres distintivos, sea genéricos, sea específicos: se llaman nec- tarios ; se ha dado esta denominación á unos órganos glandulosos, de forma muy variada, agrupados en el fondo de las flores de cier- tas plantas, y que parecen tener por papel único de secretar un lí- quido azucarado y meloso, como en muchas plantas de la familia de las cruciferas, F. 89, Durante mucho tiempo esta palabra ó vocablo no ha tenido un sentido botánico bien determinado, de tal manera que se llamaba nectario á cualquiera parte accesoria de las flores procediendo las mas veces de órganos abortados aunque sin secretar líquido alguno. El disco : se ha dado ese nomJjre á un crecido mas ó menos pro- nunciado que de ordinario se halla en el fondo del cáliz sosteniendo al ovario y sobre el cual se insertan los estambres : se presenta con forma de rodete, de anillo, cepilla ó tubo, según las plantas ; algu- nos lo han llamado también torus. En los cissns, G. 815, el disco tiene dientes que indican que etíá formado de piezas soldadas entro sí. Hay plantas en que el disco está reducido á una sola glándula, según se ve en la tercianaria y en algunas polígalas, G. 975. La pervinca presenta dos glándulas opuestas, faltándole tres para com- pletar el número de las que corresponden á su disco, y muchas cru- ciferas lo tienen limitado á dos glándulas por falta del desarrollo de otras dos; puede ser doble; cuando está muy desarrollado toma la denominación de receptáculo ó asiento de la flor. OPvGANOGEAFÍA. DEL CÁLIZ. 119 CAPITULO II DEL CÁLIZ. Cuando las flores tienen una sola envoltura ó cubierta ñoral se denomina periantio ó perigonio, si es doble al contrario entonces á la mas esterior se la llama cáliz, mientras la mas interior se dice corola, como ja lo tenemos mencionado algo mas arriba. Este órg-a- no no es pues otra cosa sino el primer verticilo de la flor ó su envol- tura mas esterior formado de hojuelas libres ó soldadas entre sí que se llaman sépalos; varian en número y se dice el cáliz disépalo, hi- sópalo, cuadrisépalo j polisépalo, ó dijilo, trifilo, tetráfilo j polifilo, cuando son dos, tres, cuatro ó muchos los sépalos que lo constitu- ren ; cuando están soldadas entre sí de manera que formen un todo, el cáliz se llama monófilo ó moiiosépalo j quizás mejor gamosépalo. Se distingue en el cáliz monosépalo tres partes diferentes, que son el tubo mas ó menos largo que constituye su parte inferior limitado por la parte á donde principian sus divisiones, que se llama gargan- tay y ellas constituyen el liml)o ó parte libre mas ó menos partida, j sus divisiones se llaman tiras ó lacinias, lobos y dientes, según su tamaño y forma; se dirá pues el cáliz bijoartido, tripartido, cuad7'i- partido cuando está dividido mas abajo de la mitad ; bífiido, trífido , cnadrífido y en general hendido si lo está hasta la mitad solamente; bilobado, trilobado, cuadrilobado cuando la división no pasa del ter- cio superior; bidentado, tridentado, cicadridentado cuando las pun- tas de las divisiones están solamente libres ; se llama también en- tero y truncado. El cáliz es regular ó irregular : para que sea regular no es necesaria la total igualdad de sus partes componentes, siempre que la haya entre las que alternan con otras iguales entre sí, j por esto tan regular es el cáliz desigual ordenado del marrubio con sus cinco dientes grandes y cinco pequeños alternados, como el del jaz- min ó de otra planta cualquiera en que sean iguales. La irregulari- dad del cáliz proviene tan pronto de no estar soldados los sépalos á la misma altura, como de una soldadura menos estensa que las de- mas, de manera que parece hendido por un lado; el cáliz irregular se llama bilabiado cuando sus cinco sépalos se unen dos hacia un lado y tres hacia otro mas ó menos completamente, formando así dos labios, el uno superior y el otro inferior, como en muchas plan- tas de la familia de las labiada^, F. 76, y de las leguminosas, F. 130. La nervaeion de los sépalos ú hojuelas calicinales se distingue bastante por lo común, y el nervio medio sobre todo suele estar muy mari'ado ; pueden además presentarse otros entre cada par de hojuelas que se unen, y por esto el cáliz compuesto de 5 sépalos se puede llamar unas veces guinquenermo y otras decemnerzio; cuando se forman ángulos en la dirección de los nervios lonjitudinales d.e los sépalos, el cáliz se hs^ce angular ó prismático, como sucede al del estramonio, G. 601, y si en cualquiera caso los nervios se pro- 120 BOTÁNICA ELEMENTAL. loijgaii fuera de los bordes de las hojuelas se dicen ajñciiladas^ ar- rejonadas, espinosas, según la lonjitud y la agudeza de las puntas. En las florecillas de las compuestas, la parto libre del cáliz toma la forma de vilano, que se llama pajoso, ¡üumoso, peloso, aristado ó mernh'auoso, según si consiste en un conjunto de pajitas mas ó me- nos diferentes, de hojuelas, plumillas que son nervios divididos, pelos que son nervios simples, aristas que difieren de los pelos por su rigidez, ó membranitas soldadas formando una circular, F. 59. Los sépalos, considerados independientemente del todo que consti- tuyen ó del cáliz, son susceptibles de figuras tan variadas como las que de ordinario presentan las hojas, de manera que se les ha dado los mismos nombres ; por esta razón no volveremos á referirlos aquí, pero solamente añadiremos que estando soldadas pierden or- dinariamente la integridad, de manera que sus jiartes libres, que constituyen las divisiones del cáliz, suelen ser semi-lanceoladas, se- mi-aovadas, etc. También las desigualdades marjinales, que pueden tener las mismas hojuelas, son análogas á las de cualesquiera hojas, y al unirse las del cáliz mas ó menos divididas, hacen que este pre- sente en algunas plantas mas puntas que sépalos componentes. Con- siderado el cáliz en su totalidad ofrece formas diversas y bastante notables, especialmente si es monófilo; y se llama aqndiforme ó en forma de culDeta, globoso, aorzado ó en forma de orzuela, apeonzado 6 turbinado ó con figura de trompo; campanudo o campaniforme, embudado ó infundíbuliforme, mazudo ó claxiforme, cilindrico, tu- buloso ó acanutado ; también puede ser ventrudo, vejigoso ó hincJia- do, y al contrario comprimidlo ; en cuanto á la dirección de los sépa- los, se dice C07inivente si al inclinarse unos sobre otros se juntan ; cerrado cuando sus bordes están inmediatos, y aMerto, al contrario, cuando se desvian ; abiertisimo desviándose mucho; revuelto estando las hojuelas echadas hacia abajo, de modo que presentan esterior- mente su cara superior. En la mayor parte de los vejetales su con- sistencia es foliácea y herbácea y su color verde, pero algunas veces puede tener el aspecto y la consistencia mas delicada de la corola y estar también pintado de los mas primorosos colores, como en mu- chas plantas monocotiledóneas ; pero en este caso constituye por sí solo la envoltura floral y es un periantio ó perigonio y se áice peta- loideo '. las liliáceas, F. 16: las narcíseas, F. 21: las orquídeas, F. 27. Hay en los cálices de ciertas flores prolongaciones ó apéndices W^íTíináos jorobas , sacos, espolones, según su forma, como se observa en las orquídeas, F. 27 : en las violariáceas, F. 86-60: en las tro- peoláceas, F. 109; y en tales casos el cáliz se dice apendiculado, jo- robado, espolonado, con saco, etc. A veces los apéndices son descen- dentes y forman como alas: entonces los cálices se califican de dipteros 6 tripteros^ bialados ó trialados, según el número de alas que presentan. Algunas veces el cáliz está acompañado de un calí- culo, órgano 3^a descrito al hablar de las brácteas y del involucro, como sucede en las malváceas, F. 100, páj. 234. La duración del cáliz es varia : caduco 6 fugaz se llama cuando cae al abrirse la flor, como en las papaveráceas, F. 90 ; caedizo si lo ORGANOíjEAFÍA. — DE LA C CHOLA. 121 hace después de la fecundación j al mismo tiempo que la corola, como en muclias cruciferas, F. 89; permanente el que dura tanto que preste protección al fruto, como sucede para muchas plantas : las labiadas, borrajíneas, F. 66 y "76 ; en algunas plantas, como en el estramonio, G. 601, se rompe horizontalmente cerca de la base que sola persiste hasta la madurez del fruto. El cáliz permanente se dice marcescente cuando se marchita y se seca sin desprenderse ; otras veces dura mucho tiempo tal cual sin marchitarse y por fin puede crecer y á veces mucho, como sucede en la belladona, F. 6*7, y entonces se denomina acresciente ó acrecentahle, yxejigoso el que adquiriendo prran tamaño se vuelve membranoso y encierra el fruto, como en elalkequenje ó vejiga de perro, G. 618. Según está su su- perficie se llama el cáliz doso'zo, aterciopelado, felpudo, pubescente, velludo ó lanudo, la^npwo, glanduloso. liso ó áspero, estriado, angu- loso, espinoso, etc. Se dice sypero cuando está adherido con el ovario cuyo vértice está acompañado ó coronado por el limbo calicinal mas ó menos desarrollado, como lo tienen las plantas de las familias si- guientes : irídeas, F. 20; myrtáceas, F. 133; cucurbitáceas, F. 141: compuestas, F. 59 ; semi-wfero si está por su parte inferior soldado con el ovario y que se vuelva fruto: las lobeliáceas, F. 5*7; infero. en este caso está enteramente libre y situado por debajo del ovario; la mayor parte de las plantas lo tienen así : las labiadas, F. *76 ; las solárieas. F. 67; las sapotáceas, F. 84; las leguminosas, F. 130, etc. El cáliz suele faltar algunas raras veces, como en las plantas de las familias de las navádeas, F. 29, y de las saurúreas, etc., y en- tonces las flores se llaman desnudas. CAPITULO III DE LA COEOLA. §1. — GENERALIDADES. La corola es, como lo tenemos dicho ya algo mas arriba, la parle mas interior de la cubierta floral doble, y se halla por consiguiente inmediatamente después del cáliz, de consistencia mas blanda, de tejido mucho mas fino que este último y adornada de ordinario de los mas ricos y lindos colores, y por consiguiente muy raras veces verdosa, como'en la vid, G. 818. La corola es siempre compuesta de hojuelas sueltas ó libres llamadas pétalos o soldadas entre sí que presentan una nervacion análoga á la que hemos señalado en los sé- palos. En cada petalo hay que distinguir la base y el cqñce, la su- perficie superior ó cara y la inferior ó dorso; se llama uTia la parte mas ó menos larga y estrecha con que la base se inserta, y limbo la parte anclia ; se dice pues el pétalo unguiculado cuando está pro- visto de una uña, como en los claveles, F. 148; en las papilioná- ceas, F. 130, y sentado, al contrario, cuando está desprovisto de 12'¿ BOTÁNICA ELEMENTAL. ella; la uña es á veces glandulífera ó nectarífera, como en los ra- núnculos, G. 897 dís; la corola se á'itefíigaz ó caduca si, sin marchi- tarse, se desprende y se cae inmediatamente después de yerificada la fecundación, sea el burro, cajjparis jamaicensis, y demás espe- cies, G. 883; el cardo santo, argenione mexicana, G. 873; marcMta- l)le ó marcescente, al contrario, cuando se queda todavía pegada bastante tiempo después de verificada la fecundación y va marchi- tándose poco á poco antes de desprenderse y de caerse. 5 II. — COEOLA MONOPÉTALA. Se llama así y también gamo])étala á la que es formada de una sola pieza ó pétalo que proviene de la soldadura entre sí de un nú- mero mayor ó menor de pétalos. Se distinguen en la corola mono- pétala tres partes distintas, á saber : el tulo, la garganta y el limho, que tenemos ya definidas al hablar del cáliz monosépalo. Según sus varias modificaciones se califica de i^artida, liendida, lohada, den- tada, á la manera del cáliz, y las divisiones se llaman liras ó laci- nias, lodos 6 dientes, según su tamaño y lonjitud, cuyo número se indicará del mismo modo y con los mismos vocablos empleados para el cáliz. La corola monopétala es regiilar ó irregular : en el primer caso se compone de partes iguales é igualmente soldadas, pero puede sin embargo ser regular con lobos desiguales, siempre que en nú- mero iaual alternen los mavores con los menores, como sucede en muchas gencianas, F. 64, y también siendo irregulares los lobos re- sulta un todo regular , siempre que aquellas sean perfectamente iguales, como en la adelfa, G. 65(3. Sus formas muy variadas se es- presan por los términos de globosa, aovada, aorzada, campamida, calatif orine 6 hemisférica, ciatif orine ó semejante á una copa; tuhíi- losa ó sea acarmtada en toda su ostensión, como la espijelia, G. 597, y tubulada, es decir, formando tubo inferiormente ; claviforme 6 mazuda, embudada ó infundibuliforme, como en el tabaco, G. 599; asalmllada si forma superiormente como un platillo : el jazmin, G. 492 ; enrodada la que se parece á una rueda : la borraja, G. 672 ; la yerba mora, G. 622, y demás solanos; estrellada cuando parece es- trella , la borreria, G. 704: escuteliforme ó conforma de escudo. En las corolas tubuladas el tubo puede ser rentrud), delgado y hasta capilar ó cuando menoa Jlliforme : el galán de dia, cestriim diur- num, G. 626. El limbo q^ plano, CMcavo, derecho, abierto, revuelto, como para el cáliz, y según se halla mas o menos profundamente dividido se Wa-mú. partido , hendido, lobado, dentado, etc. La gar- ganta puede estar ensanchada ó estrecha, prismática, desmida, pe- luda ó apendiculada, glandulosa, etc. La corola monopétala irregular que proviene de partes desigua- les ó desigualmente unidas, presenta también muchas formas dife- rentes, de las que algunas son muy notables, principalmente las que dependen de la soldadura desigual de los pétalos, como sucede cuando hay dos labios formados el uno de dos pétalos y el otro de tres; entonces se llama labiada ó mejor bilabiada, cuyo labio supe- ORGANOGRAFÍA. — DE LA COROLA. 123 rior se dice galea y el inferior larla, y tiene la boca ó garganta abierta como el romero, G. 500 ; el labio superior puede ser entero, ascendente, alierto, abovedado : las salvias, G. bOlfptano ó compri- mido , y también lifido, escotado, etc.; el inferior se llamará trífi- do, trio)artido ó trilolo, con los lobos ó lacinias laterales general- mente menores que la intermedia, algunas Teces dividida de modo que el labio viene á parecer cuadril oh ado \ á Teces es ]^)lano, otras veces sus lobos laterales son rexueltos, el intermedio es cúncavo, festoneado y ha^í?í festoneado y escotado á la par. La corola 2^erso- nada ó eiimascarada se distingue de la bilabiada en que tiene la boca cerrada por una eminencia del labio inferior, que se llama jíJíí^- ladar ; pero cuanto á la composición de uno y otro labio no hay di- ferencia entre las dos. La corola ho^íii-rasgada ó ioqíii-aMerta es una simple modificación de la corola bilabiada; tales modificaciones, orijinan las corolas monopétalas anómalas, entre las cuales citare- mos la dljitali forme . Se llama la corola xolteada ó resíi^ina cuando hay un solo labio abajo y los demás están unidos arriba, como en la albahaca , ccymiím a7nericanum, G. 516; también ofrece un aspec- to notable la corola bilabiada cuando los dos pétalos superiores, siendo pequeños, se sueldan menos entre sí que con los inmediatos, como en el teucrio, G. 512. Las florecillas que constituyen las compuestas son monopétalas, regulares ó irregulares, según si sus 5 pétalos están soldados igual ó desigualmente; tales corolas pueden ser Mlaliadas, ttilnlosas ó liguladas, nombres que corresponden á sus formas ; las últimas tie- nen figura de cintillas, porque sus dos pétalos superiores apenas se unen entre sí, mientras que forman un todo con los demás. Ordina- riamente se Woimdin fósenlos \-d.^ fiorecillas tubulosas y semi-f ósculos las liguladas, F. 59. § III. COROLA POLIPÉTALA Ó DIALIPÉTALA . Se llama así á la formada de pétalos libres, cuyo número Taria bastante, de tal manera que atendiendo á él se llama di'pétala, tri- pétala, tetrapétala, pe7ita])étala, etc. Los pétalos son regulares ó irregulares según si, lonjitudinalmente doblados, coinciden con exactitud ó no con sus dos mitades; según su forma y figura propia.se han calificado de c'ncavos, de navicula- res, de cocleari formes ó parecidos á una cuchara, de tiihiilosos, de laMados, de galeiformes ó en forma de casco, de cuculiformes ó dis- puestos encucurucho, etc. En muchos pétalos las márj enes presen- tan desigualdades mas ó menos notables, comparables á las que he- mos señalado en las hojas, de manera que se espresan con iguales términos : se llaman pues fimHdos ó franjeados, apendiciilados ; el apéndice puede ser un espolón, alguna escama ó laminilla , ran-un- Gulus, F. 96, páj. 224, ó una cresta, como en muchas poligáleas.,. F. 107. La corola polipétala puede ser re¿;ular ó irregular, según sean iguales ó desiguales en tamaño y forma los pétalos que ia constitu- 124 BOTÁNICA ELEMENTA.L. yen : algunas corolas polipétalas regularos han recibido nombres es- peciales: cruciforme aquella cuyos 4 pétalos están dispuestos en cruz: las cruciferas, F. 89; cariofüea ó aclavelada la de las clavellinas sencillas y de las cariofíleas en general, F. 148; rosácea la de cinco pétalos sentados ó de uñas cortísimas, como en la rosa simple, G. 1151 ; las pafa'>'eráceas, la de las adormideras y amapolas sencillas, argemone mexicana, G. 813; las mirtáceas, F. 133. La corola polipétala irregular se llama pa]íiUfmácea ó amaripo- sada cuando es formada de 5 pétalos mas ó menos unguiculados. cuyo superior, de ordinario mayor que los otros y doblado por ar- riba, se denomina xexilo ó estandarte ; dos inferiores frecuente- mente soldados entre sí, forman la quilla, y dos laterales, interme- dios ó libres, mas ó menos desarrollados, que han recibido, el nombre de alas: los dólicos, mucuna, canavalia , etc., G. 1069, 1054, 1031; anómala, como en la capuchina, F. 843; en el pensa- miento, F. 86, formada de 5 pétalos desiguales, pero cuyo aspecto es particular. g IV. — COROLA SEUDO-POLIPÉTALA Ó fc)í;UDO-MONOPÉTALA , LLAMADA TAMBIÉN CATAPf^'OC.LA. r Llamaremos así á las corolas cuyos pétalos están soldados entre sí por medio de sus uñas, haciendo cuerpo con la base del andrófo- ro, y que se desprenden y caen en una sola pieza á manera de las corolas monopétalas lejítimas : las malváceas, F. 100, páj.234, la tienen así. ' . V SECCIÓN III CAPITULO I CONSIDERACIONES GENERALES SOBRE LA FECL'NDACipN, EL EMBRIÓN Y LA SEMILLA. Artículo 1°. — Fecundación. — Aunque en la mayor parte de las flores permanecen inmóviles los órganos sexuales, son muchas sin embargólas dotadas de una marcada escitabilidad, que de ordinario se manifiesta por movimientos de los estambres y de los pistilos, pero con menos frecuencia : en muchas liliáceas hay aproximación de los estambres al pistilo ; en los geranios se encorvan los filamen- tos para que la antera se aplique al estigma ; en los claveles y en la ruda los estambres se van aproximando sucesivamente al estigma, haciéndolo en primer lugar los alternos con los pétalos, y en segun- do los opuestos á ellos. OHGANOGRAFÍA. — DE LA. FECUNDACIÓN. 125 La capuchina ó espuela de galán tiene 8 estambres que turnan con bastante regularidad durante ocho dias, acercándose uno á otro; en el tabaco todos sus estambres se aproximan simultáneamente: flores hay también cuyos ñlamentos necesitan ser escitados mecá- nicamente para moverse, como los del nopal, G. 1103. No faltan flores cuyos estigmas, de ordinario inmovibles, esperando como órganos femeninos la acción de los masculinos, se inclinan hacia los estambres, como sucede en las pasionarias, G. 1085 ; en algunas los estigmas bilamelados se abren para recibir el polen, como en la escorzonera, G. 547; en el totumo, G. 556, cerrándose después de cojido y también cuando se escita mecánicamente. La posición rela- tiva de los estambres y pistilos es casi siempre la mas ventajosa para que el polen caiga sobre los estigmas á falta de movimiento que lo facilite. Frecuentemente los estambres son mas largos que los pistilos, cuando las flores hermafroditas están derechas, pero si las flores icrualmente hermafroditas se hallan inversamente coloca- das ó á lo menos inclinadas, suelen ser los pistilos mas largos que los estambres, cuyas anteras respecto de los estigmas toman de este modo la mas favorable posición; pero muchas flores hermafroditas hay con los estambres y pistilos de igual lonjitud, y en tal caso los movimientos propios de estos órganos, ó los producidos por el viento y los insectos, pueden contribuir poderosamente á que el polen cai- ga convenientemente cuando por su abundancia no se halla asegu- rado el aprovechamiento de alguna parte de él. Pueden ademas ser fecundadas unas flores por el polen de otras inmediatas, especial- mente cuando dispuestos en cabezuelas los dos órganos sexuales no llegan á sazón al mismo tiempo en cada una de ellas. General- mente las plantas monoicas tienen las flores masculinas mas al- tas que las femeninas, ya sea en la misma espiga, como el ricino, G. 144, ya en espigas distintas, como en el maiz, G. 172; y como esta sea mas eventual en las dioicas, sus flores femeninas tienen muy salientes y muy duraderos sus estilos y además las flores masculinas son numerosísimas. Las precauciones para evitar la acción de la hu- medad sobre el polen son varias y muy notables en diversas plantas, mientras que en otras faltan del todo, quedando la fecundación abandonada al influjo de circunstancias no siempre propicias, como sucede siempre para con las plantas no acuáticas, porque las que lo son nunca se hallan desprovistas de medios para impedir la esteri- lidad. Entre las plantas que viven en el aire hay muchas cuyas. co- rolas se cierran de noche, poniendo así los órganos sexuales á cu- bierto de la humedad atmosférica, y lo mismo se observa en varias plantas al prepararse el tiempo para llover ; los pedúnculos de otras se encorvan al anocliecer, y quedando sus corolas vueltas hacia abajo, no entra tan fácilmente la humedad; también se libran de ella algunas flores ocultándose debajo de las hojas; enñn, para ma- yor seguridad se verifica la fecundación dentro de los botones de muchas flores, ó estas se abren en tiempo seco, pudiendo aun así prestar un buen abrigo sus envolturas florales, y en especial la co- rola, en virtud de algunas de las disposiciones que le son propias. Pero en las plantas acuáticas suele ser mas complicado el modo de 126 BOTÁÍÍICA ELEMENTAL. veriñcarse la fecundación, sin que el contacto del agua pueda impe- dirla, ejerciendo los rjrganos sexuales sus funciones en una cavidad llena de aire ó saliendo entonces las flores fuera del agua. Como ja lo tenemos dicho al hablar del estigma y del polen, la caida de e>Áe último sobre el estigma es lo que determina la fecun- dación; entonces los tubos emitidos por los granos de polen pegados en el estigica se introducen á través de los intersticios del tejido conductor del canalito del estilo y continúan alargándose á causa de una especie de germinación, al principio de la cual se ha podido observar en la fovila que contienen el movimiento giratorio , aca- ban por llegar al interior de la celdilla, en cuja cavidad están al- gunas veces colgantes libremente y otras veces se van arraíitrando por encima de las placentas. Entonces encuentran los óvulos que se les presentan con la boca abierta de su micrópilo, por donde pene- tran poniéndose así en contacto con el saco embrional directamente cuando está algo saliente por fuera, ó en el caso contrario va pe- netrando entre las células del núcleo j se hallan en relación con las vesículas embrionales mediatamente á través de las paredes del saco, j raras veces agujereándolas inmediatamente. Con tal con- tacto, sin duda las reacciones establecidas á través de esas mem- branas delgadíbimas entre los fluidos contenidos en el tubo polínico, V por otra parte en las vesículas, se verifica el fenómeno misterioso de la fecundación ; entonces se marchita y se ve desaparecer el tubo polínico, á la par que una de las vesículas embrionales, rarísimas veces algunas, se desarrollan á la vez, multiplicándose por división: de tal desarrollo resulta el embrión. Puede suceder que algunas ve- sículas embrionales no se hallen en contacto con el tubo polínico, j entonces abortan y no se desarrollan, lo que se observa con fre- cuencia: en efecto, algunas llegan á la madurez perfecta, mientras que otras abortan, aunque contenidas las unas y las otras en la mis- ma celdilla. En su principio el embrión no es mas que una célula globosa llena de materia mucilajinosa sin apariencia de granillos, y poco á poco en el mucílago se organizan utriculillos que se multiplican y com- ponen una masa celulosa. Nuevos utrículos se presentan dentro de los primitivos, y la forma del embrión varia porque se alarga y ad- quiere un eje mas largo, de cuyas estremidades corresponde la supe- rior á la chalaza y la inferior al micrópilo, viniendo á constituir la una el cuerpo cotiledonar y la otra el cuerpo radicular. Sigue orga- nizándose el embrión y marcándose mas su forma propia, notándose en el dicotiledóneo que los dos cotiledones nacen del eje como apén- dices. Verificada pues la fecundación del modo señalado, la flor se mar- chita, inutilizándose los estambres y desecándose el estilo y el estig- ma, mientras que el ovario solo, ó á veces acompañado del cáliz y rara vez de la corola, comienza á tomar incremento para llegar por fin al estado de fruto perfecto. Art. 2. — Semilla. — Los huevecillos, fecundados ya, principian á desarrollarse y á crecer al mismo tiempo que el ovario y adquie- ren sucesivamente mayor consistencia, hasta tomar la que corres- OKGAKOGRAFÍA. — DE LA SEMILLA. 1*27 ponde á las semillas completamente desarrolladas en que se ha vuelto, siendo entonces capaz de orijinar otra planta semejante á la de que procede. Esperimenta el huevecillo fecundado cambios suce- sivos que en lo esterior alteran mas ó menos su organización pri- mitiva, de manera que se pueden conservar todas las envolturas que se pueden hallar en la semilla madura; pero con mayor fre- cuencia se confunden en una sola la primina y la secundina; el núcleo, empujado también por el saco embrional y el embrión, des- aparece con frecuencia, porque se suelda con los tegumentos ó e&tá absorvido; el mismo saco embrional, por fin sufre modificaciones, quedando convertido en uua capa celular sustituida á una célula única, que lo constituía primitivamente. Así es por lo común como se hallan en la semilla madura dos tegumentos en lugar de los cua- tro que se contaban en el óvulo, cuyo esterno se llama testa, y el otro interno denominado endopleiira ó membrana interna. Al mismo tiempo se verifican en su interior otros cambios, de los cuales re- sulta que el líquido mucilajinoso que existia en el saco embrional, y que tenemos señalado mas arriba, se organiza poco a poco y se con- vierte en tejido celular, que aumenta sucesivamente el espesor del saco sobre cuyas paredes se va depositando ; puede suceder lo mis- mo fuera del saco, ó sea dentro del núcleo, porque este no siempre desaparece. El joven embrión se alimenta de estas materias semi- líquidas susceptibles de organizarse, y absorviéndolas llega á ocupar el sitio que dejan : es la absorción completa en muchos casos, y en- tonces el embrión queda inmediatamente cubierto por las envoltu- ras; pero otras veces continua rodeado de la materia ya organizada contenida en el núcleo, ó con mayor frecuencia en el saco em- brional. g I. — ENDCSPERIIO. Esta materia solidificada que cubre inmediatamente el embrión de muchas semillas, harecibido los nombres áe perispermo, áe en dosper- mo ó albumen, sin reparar que se haya formado dentro del saco em- brional ó en la superficie interna del núcleo. No tiene con el embrión ninguna continuidad de tejido: está pues enteramente independiente de él, á lo menos en apariencia, pero lo rodea, lo envuelve mas ó menos, ó esta situado á su lado, y siempre dispuesto de tal suerte que se halle listo para suministrarle el alimento cuando lo necesi- tará; su tamaño es muy variable y siempre en razón inversa de el de los cotiledones que debe suplir ó reemplazar cuando demasiado delgados son incapaces de cumplir con su objeto, que consiste en remediar las necesidades del embrión nacidero ó recien nacido. El endospermo consiste pues en una masa organizada que no es para nosotros mas que un depósito natural de materias alimenticias, de figura, tamaño y consistencia muy variados : puede ser carnoso, cW- neo, como en el café, en los dátiles, G. 205; harinoso, como en las gramíneas, F. 10, 11; cartilajiíwso, coriáceo, huesoso, lapídeo, ca- seoso, mucilajinoso, oleajinoso .• en el ricino, en el coco, etc., G. 144, 128 BOTÁNICA ELEMENTAL. 91. De ordinario forma una masa continua; en algunas rubiáceas es grumoso^ en otras plantas está compuesto de láminas y también puede hallarse arrugado^ hendido, rumiiioÁo, cuando presenta ar- rugas ó pliegues numerosos, penetrando mas ó menos profunda- mente en él como en las anonáceas, F. 95 ; en el arequiero, G. 100, y hasta lohado, pero raramente. Las semillas de las ninfeas, G. 416, tienen dos endospermos, el uno está formado por el núcleo y el otro interior por el saco embrional. No existe en las semillas de todas las plantas, tiene una base y una punta que corresponden á las mis- mas partes de la semilla donde se halla. S II. — SEMILLA PROPIAMENTE DICHA Ó MADURA. Se llama así al huevo vejetal llegado á su completo desarrollo, á su perfección, y por consiguiente capaz, después de puesto sea na- tural sea artificialmente, en ciertas condiciones particulares y ne- cesarias al desarrollo de la vida, de crecer y de volverse un ser se- mejante al de que proviene. Contiene pues envuelto y encerrado en una ó algunas capas ó envolturas especiales, llamadas epispermo, el embrión, germen preciosíi.imo que constituye la parte vital del hue- vo vejetal y que es el mii-mo feto vejetal lejítimo cuya existencia asegura la conservación y la propagación délas especies. La semilla se halla en el fruto y es formada del epispermo y de la almendra, compuesta del endospermo, cuando existe, y del embrión. De ordi- nario se nota una cicatriz de color mas bajo ó mas subido que el general de la semilla, marcándose así el punto por donde se hallaba unida ala placenta inmediatamente ó mediante el cordón umbilical: es el Mío ú omhligo, en cuyo centro ó hacia un lado hay uno ó mas agujeriüos que se llaman onf alodio y señalan el tránsito de los vasos destinados á la semilla. Según su posición y forma, que son bastante variadas, se dice el ombligo semilunado, acorazonado, li- near, oblongo, orbicular, etc. Además puede reconocerse la chalaza diametralinente opuesta al ombligo en muchas semillas que la pre- sentan bajo la forma de una eminencia mas ó menos pronunciada, ó de un pezón cito que tiene á su alrededor cierta depresión circular ó de una simple mancha que se nota en el tejido del tegumento con límites poco determinados. Desde la chalaza hasta el ombligo corre una línea á veces proemineote, como en las pepitas de limón, G. 977, que se llama rafe, no siempre visible esteriormente , pero cuya existencia es consiguiente á la distinción de la chalaza. Las semillas procedentes de óvulos ortótropos ó campulítropos no presentan una chalaza distinta, siempre que en ellos no haya habido altera- ciones suficientes para separarlos algún tanto de sus respectivos ti- pos; en las do huevecillos anátropos el ombligo se aparta mas ó me- nos de la chalaza. La micr 'pila es otro punto notable que puede verse con el ombli- go y la chalaza, ó con el primero solo, distinguiéndose meramente por su color blanquecino cuando no presenta una pequeña abertura, como sucede en las habichuelas, guisantes, etc., G. 1077. Proviene ORGANOGRAFÍA. — DE LA SEMILLA. 129 la micrópila de las aberturas del huevecillo, llamadas endostoma j exostoma, ó sea micrópila interior y micrópila esterior, que llegan á cerrarse del todo ó casi enteramente á favor de un tejido poco apretado, variando en cuanto á su posición respecto al ombligo, como varia la del ápice del núcleo en el huevecillo, según su modo de crecer. Las escrccencias carnosas ó callosas que presentan varias semillas en diferentes puntos de la superficie se señalan por las de- nominaciones de carúncula, callo, ttcbérculo : en las semillas del ri- cino, G. 144, está la carúncula por encima del ombligo, j debe su oríjen á los bordes engrosados y sobresalientes de la micrópila, que al principio formaban un embudo, en cuyo fondo estaba dicho agu- jero. Los granos de trigo y demás gramíneas presentan esterior- mente una mancha morena llamada espilo, correspondiente al om- bligo de la semilla. Algunas semillas están además rodeadas de una especie de envoltura mas ó menos incompleta, sobrepuesta á sus te- gumentos, proviniendo del cordón umbilical, ó del rafe, llamada arilo, y aunque no llega á cerrarse completamente por el ápice, puede desarrollarse mucho, como sucede en el bonetero, evonymus vemicosiis, F. 124; pero aun entonces se le ve abierto por la punta, á pesar de ser mas largo que la semilla: la del nenúfar ó ninfea blanca, G. 416, tiene un arilo cerrado del todo, puesto que presenta una abertura esti'echa, la cual por el contrario es ancha en las pa- sionarias, G- 1085. A veces el arilo está teñido de colores mas ó menos brillantes y su borde elegantemente dividido; está calado, ceráceo y de un color rojizo moradusco, el de la nuez moscada, 11a- madovulgarmente maclas, G. 205. El de lablighia sápida es grande, carnudo y comestible, G. 851. Otras plantas hay en que el arilo, le- jos de crecer mucho, no pasa del estado rudimentario, presentán- dose al rededor del ombligo á manera de un tubérculo carnoso de color diferente de la semilla, y por esta razón se le ha llamado arilo falso ó ariloide; se llama estrofilla al que resulta Je la prolongación del rafe. La semilla tiene un ápice y una iase conforme á su posición en el fruto: la segunda corresponde con el ombligo, mientras el ápice es la parte diametralmente opuesta á él. Se distinguen además la cara y el dorso, é importa hacerlo cuando se hallan suspendidas las se- millas y también si están ascendentes ó peritropas , correspondiendo entonces la cara á la placenta y el dorso á la parte opuesta; puede el ombligo hallarse sobre una de las dos anchas superficies de la se- milla, siendo aplanada, j en ese caso se distinguen fácilmente la cara del dorso; pero si se halla sobre el borde ó márjen que separa las dos superficies, vienen á ser estas mas bien que cara y dorso, los lados de la semilla, que se llama compriínida, y deprimida en el pri- mer caso. La semilla puede tener tegumento simpile, dohle ó triple, distinguiéndoles entre sí cuando están reunidos por los términos de tegumento esterior ó testa, tegumento interior ó endoplema, y tegu- mento intermedio ó mesospermo : el interior es generalmente del- gado, niemhranoso y transparente, mientras que el esterior, crustá- ceo^ huesoso 6 acorchado, ofrece mas resistencia y determina los límites de la semilla, dándole además el color que presenta. TOMO I 9 130 BOTÁNICA ELEMENTAL. El color de las somillaí! es tan Vfiriado como el de las flores y de las frutas, sin tener sin embargo ninguna relación con él; unas tio- nen color de escarlata: la peronilla, al^rus precatorms, G. 1044; otras son amarillas : el maiz, zea mais, Gr. 17'^; las hay parduscas, matizadas, pintadas, disciplinadas, pero la mayor parte de ellas son blancas ó prietas. Presenta gran diversidad respecto á sus dimen- siones la semilla, guardando relación con el fruto cuando es única, pero si están muchas en un fruto su tamaño mengua en proporción del número. Atendiendo á la forma, que es también muy variada^ se la ha denominado globosa, ovoidea, arriñooiada, oblonga, cilm- drica, apeonzada, recta ó rectilinea, encorvada, redoblada, aplana- da^ lenticular, angulosa, etc. Las semillas aplanadas pueden tener sus bordes salientes, ya gruesos, ya membranosos, y en este caso masó menos rasgados; se llaman entonces las í^evíii\\-^'& elevadas, membranosas, exostema floribunda, G. ^719, ó rasgados mas ó me- nos : cuando la membrana marjinal es bastante ancha, toma el nombre de ala y se llama alada la semilla, séalo circularmente ó en determinados puntos, y se llama entonces perÍ2)terada : la moringa ])terigosr)erma, G. 1001 ; trialada ó wiialada; atendiendo á la su- perfície se llámala semilla Zz^íí, lustrosa, arrugada, estriada, retí- culada, escaüado-picnteada, hoyosa, alveolada ¡^ezoncillosa, tuber- culada, muricada, aguijonosa, lampiña ó vellosa, penachuda, cuando está provista de una cabellera ó penacho : la adelfa, el as- clepiade de Curacao, G. 656, 664; rugosa y no liísirosa, como la de la secua, G. 237. g III. — DEL E:\IBilION. El embrión ó fetovejetal, parte esencial de la semilla, es verda- deramente la planta nacedera en miniatura, es decir que constituye un individuo, cuya vida dormida todavía necesita para salir de su letargo y despertarse, es decir, principiar á vivir, del concurso de algunas circunstancias que estamos prontos á señalar y esplicar, al hablar de la germinación. Se compone el embrión de 4 partes dis- tintas, que son: \di raicita ó rejo, el tallito, blastema ó ejecillo, el cuerpo contiledonar ó los cotiledones, y por fin la gemecíta ó plumilla. En todo embrión se distinguen una base y un ápice, corí*espondien- do la primera á la estremidad de la raicita y el segundo á la supe- rior de los cotiledones, mas alta que la estremidad de la yemecita, verdadero ápice orgánico de que se prescinde por hallarse oculto. Comunmente hay un solo embrión en cada semilla, pero pueden ha- llarse mas, como sucede en las pepitas de naranjo, en los piñones y en muchas semillas de las coniferas y cicádeas, G. 977. — F. 33, 34, 35, notándose que generalmente se desarrolla uno solamente, abortando los demás. La forma del embrión no es siempre- seme- jante á la de la semilla, especialmente cuando está acompañado por un endospermo voluminoso : es de ordinario aovado, cilindricOy ma- zudo ; "^Müde ser también globoso, Uiiticular, cordiforme, etc. Varia todavía mas su forma cuando tiene un solo cotiledón, entonces es ORGAlNOGRAFÍA. — DE LA SEMILLA. 131 fusiforme, piramidal, filiforme, ])ateni forme, fungiforme^ y otras; veces está engrosado por un estremo y adelgazado por el otro, ó en- grosado por ambos. Atendiendo á su dirección propia se denomina recto, encovcado, arqueado, fiexiioso ú ondeado, semi-circiüar, espi- ral y apelotonadlo. Respecto al endospermo, toda vez que exista, no es constante la posición del embrión, pudiendo estar añadido en su interior, y se denomina incluso ó i/itrario y ha recibido los nombres de axil, ba- silar, apiciilar ó escéntrico, según el lugar que ocupa; cuando al. contrario está situado fuera del endospermo se llama esfrnrio ó este- rior, entonces puede rodear al endospermo á manera de "anillo, ó estar aplicado á un solo lado y se denomina periférico y lateral. Según su posición relativamente al lado de la semilla, disposición muy importante y bastante constante en ciertas familias, se llama el embrión derecho ú liom 'tropo-, cuando su raicita corresponde al ombligo de la semilla, estando los cotiledones dirijidos hacia el punto opuesto; en otros casos e% inverso ó antitropo, porque se ha- llan los cotiledones hacia el ombligo, y al contrario la raicita; se" llama anfüropo el embrión cuyos dos estremos corresponden al om- bligo, y por fin heterútropo, no dirigiéndose á la base ,de la semilla estremo alguno del embrión. Esto último sucede siendo unas veces transverso el embrión y otras ohlicuo, con respecto al ombligo, por- que, en ambos casos los cotiledones y la raicita pueden no hallarse enfrente de él. Algunos botánicos han señalado la posición del emr^ hrion respecto del fruto, llamando la raicita sú/pera , infera, centrir^ feta ó centrífuga, considerando que si se prolongase, se dirijiria sea hacia el ápice, sea hacia la base ó hacia el centro ó la circunfe- rencia del fruto. Raicita. No puede fijarse con exactitud antes de la germinación donde se halla el cuello ó sea donde empieza, pero suele decirse que esta es- toda la parte del ejecillo situada debajo de los cotiledones que al germinarse las semillas ha de volverse raíz y penetrar en el suelo. Su posición relativa con los cotiledones suministra con fre- cuencia muy buenos caracteres: dóblase en muchos casos sobre los cotiledones, aplicándose ala comisura que estas forman, ó bien cae sobre el dorso de alguno de ellos, que se llaman aciwil) entes, mien- tras'que ella se llama lateral sucediendo lo primero, así como veri- ficándose lo segundo se denominan incumbentes los wno^.j dorsal la otra. En algunas semillas la raicita está resguardada por una vaina que presentan los tegumentos, siempre única en su oríjen,, aun cuan- do los cotiledones sean muchos ; pero puede tener en su base los ru- dimentos de raicillas secundarias, como sucede en muchas gramí- neas. Es tan larga como los cotiledones ó mas corta^ y la iguala, á veces en lonjitud; sucede frecuentemente cuando existe un solo cOr- tiledon, que la raicita sea mas voluminosa que él, se llama macro^ podio el embrión, entonces falta el endospermo. Según su forma la raicita, se llama cilindrica ó c'nica, aovada, globosa, filiforme^ fusiforme, mazuda, complanado-trian guiar, agudw, obtusa por la base, muy engrosada en el ápice ó tubercidada en el mismo. Puede tener al principio una vaina llamada coleorriza, ó carecer. dLe. ella, y 132 BOTÁNICA ELEMENTAL. hay casos en que la raicita se halla adherida al perispermo : el em- brión se ha denominado endúrrizo, exúrrizo j sinórrizo, conforme á tales circunstancias. § IV. — COTILEDONES. Se llama así á uno ó á dos apéndices que salen del ejecillo ó talli- to, mas ó menos desarrollados y gruesos y siempre en razón inversa del tamaño del endospermo, cuando existe, y constituyendo la ma- yor parte de la almendra cuando falta este. Se tiene ese órgano por el análogo de las tetas de los animales mamíferos, porque su objeto consiste también en suministrar al vejetal nacedero ó recien nacido su primer alimento, que preparan ó elaboran á favor de los princi- pios inmediatos que tenian guardados á propósito, lo que correspon- de al período de lactación de los animales: véase el Discurso preli- minar, páj. , lo que tenemos dicho sobre el particular. Todos losvejetales provistos de flores propiamente dichas ó de órganos sexuales lejítimos tienen semillas, y por consiguiente cotiledones que son dos ó uno solamente; sin embargo, plantas hay que debiendo contar entre las provistas de cotiledones, carecen de ellos, y está reducido su embrión al ejecillo sin apéndice alguno: hállanse en ese caso la cuscuta, G. 585, las orquídeas, F. 27. Cuando hay dos coti- ledones están opuestos y aplicados uno á otro, con la yemita en el medio de ellos, sin dejar de quedarse libres; si hay un solo cotile- dón en muchos casos, parece el embrión homojéneo á primera vis- ta, y es menester buscar la yemita en -el fondo de una pequeña ca- vidad que se halla en el cotiledón abierto. A veces los cotiledones pasan de dos y llegan hasta doce ó quince, como se observa en al- gunas coniferas, F. 33, 34; pero siempre se hallan dispuestos en verticilo. De ordinario los cotiledones son carnosos, teniendo con- vexa la superficie esterna, y plana la interna, ó planas ambas, siem- pre lampiñas, y solo en algunos casos con glándulas vesiculares; pueden hallarse sentados, estar reducidos aun peciolo ó componerse de peciolo y lámina; algunas veces se soldán entre sí de tal mane- ra que se confunden y se llaman conferruminados , pseudo-mo- nocotiledóneos : el embrión en ese caso se llama macrocéfalo y el conjunto de los cotiledones adheridos se denomina cuerpo cotiledó- neo. Son generalmente iguales siendo dos; pero hay plantas en que difieren por su tamaño y figura, estando ambos independientes ó abrazados, de manera que el mayor, plegado, contenga al menor también plegado. En cuanto á los dobleces de que son susceptibles los cotiledones apareados, se nota que presentándolos uno y otro á un tiempo, varia la manera según los casos ; si están los cotiledones plegados lonjitudinalmente y abraza al interior el esterior, se lla- man conduplicados, reclinados, cuando la parte superior se halla do- blada sobre la inferior; presentando los pliegues lonjitudinales, puede suceder que la mitad de un cotiledón se halle entre las dos mitades del otro: se llaman en ese caso obvohitos ó semi-ahrazados, y también los hay eqíútantes ó abrazados : circinados se llaman los ORGANOGRAFÍA. — DE LA SEMILLA. 133 que se arrollan en espiral desde el ápice á la base, y co7ivolutos ha- ciéndolo de un borde al otro; cuando están doblados á manera de abanico se llaman plegados, y arrugados estándolo con menos regu- laridad. La forma de cada cotiledón está muy marcada y se diferencia de la del embrión respectivo, y atendiendo á ella se denominan linea- res, ohlongos, aovad.os, lanceolados , orhiculares, reniformes, acoro,- zonados, falciformes, etc. Los cotiledones pueden tener orejuelas en su base, como sucede en el olmo, ^llmus cam'pestris ; raras veces en fin se hallan divididos, r si lo están se califican de escotados, lohados, pinatíjidos j hasta de yartidos, según los casos. Bastantes veces el embrión tiene un cotiledón único, cuya forma no se dife- rencia de la suya propia. Según su consistencia y composición quí- mica, los cotiledones se dicen membranosos ó carnudos, gruesos ó delgados , feculentos ó harinosos : las hichuelas, G. 1071 ; oleajinosos .- la secüa, f evites cor difoUa, G. 237. Atendiendo á la existencia ó á la falta de los cotiledones en las semillas de los vejetales, se les ha calificado de cotiledóneos v de acotiledóneos, y esa consideración ha servido de base á las dos gran- des divisiones del reino vejetal en vejetales ó plantas acotiledóneas ^ agamas ó esexuales, inemlrionadas y criptógamas, llamadas tam- bién celulares, mientras que la otra grande división contiene Uas plantas cotiledóneas, fanerógamas y vasculares', esta última se ha divido en dos, según silos vejetales tienen un cotiledón único, y en- tonces se llaman monocotiledóneos , 6 dos y hasta alcunos, v se cali- fican de dicotiledóneos. § Y. — YEMECITA ó PLUMILLA. Se llama así á aquel cuerpecito simple ó compuesto que sale de entre los dos cotiledones en las plantas dicotiledóneas, siempre es- condida entre ellos, que principia al nivel de ellos, y que constituye el rudimento de las partes que han de vivir en el aire libre, y que la germinación hace siempre bien manifiesta ; en las plantas monoco- tiledóneas está contenida en la concavidad formada por el cotiledón y muy á menudo te ve bien solo después de germinada ó de puesta en germinación la semilla. § VL — TALLITO, BLASTEMA Ó EJECILLO. Se ha dado esta denominación á la parte del embrión que reúne la base de cuerpo cotiledóneo con la raicita ; bastantes veces parece no existir y se vuelve aparente solo durante la germinación y se lleva consigo los cotiledones á fuera de la tierra y sostiene la yemita. 134 BOTÁNICA ELEMENTAL. CAPÍTULO II DE LA GERMINACIÓN. Como lo tenemos dicho mas arriba, fecundados los óvulos y Tuel- tos así seres vivientes, aunque gozando de una vida latente, el ova- rio que les contiene recibe mayor impulso vital, j se desarrolla con mayor ó menor prontitud, pero siempre poco á poco j gradualmente, esperimentando durante esta especie de gestación modificaciones que, cambiando su naturaleza, su figura j su composición química primitiva, lo vuelven fruto perfecto que, maduro bastantes veces, se abre espontánea y naturalmente, echando á fuera la semilla ó el huevo vejetal, capaz entonces de vivir de su vida propia ó de ger- minar : así se verifica el parto vejetal, si es lícito espresarse así, para mayor intelijencia de los hechos. Así sucede también para los reptiles, las tortugas y caimanes, y también ciertas aves comiO las avestruces, las del mar y de las playas, com.o lo hemos visto en las del Orinoco, cuyos huevos, puestos y abandonados en la arena, echan los chiquillos después de haber sido espuestos á la influencia del aire, de la humedad y del calor solar durante cierto tiempo, lo que cons- tituye una especie de incubación solar análoga é igual á la que ne- cesitan también los huevos vejetales para echar. Si no hay parto vejetal, es decir si los frutos llegados á su estado perfecto ó á su madurez no se abren naturalmente, entonces, después de desprendi- dos de la planta que les produjo y caidos al suelo, sus partes acceso- rias ó las envolturas de la semilla se van destruyendo poco á poco, esperimentando reacciones químicas ó metamorfosis ya señaladas y esplanadas mas arriba en el Discurso preliminar, páj. 28, y el hue- vo vejetal se halla después de esto en las miomas circunstancias que los del primer caso; e&ta segunda clase tiene su análogo entre los insectos; en efecto, en algunos los huevos echan en el cuerpo ó ca- dáver de su madre y entonces salen de el : tales son las cochinillas, los, alacranes, las niguas, etc. Se llama pues germinación al conjunto de fenómenos tanto físicos como químicos, que se va esperimentando en la semilla fecundada y madura, después de separada ó de desprendida de la planta madre y puesta sea natura,l ó artificialmente en un suelo húmedo y tal que pueda gozar la influencia del calor solar y del aire atmosférico. Con la influencia poderosa de los tres ajentes físicos electricidad, caló- rico y alguna luz difuíra, obrando á la vez y quizás supliéndose el uno por el otro á fin que sea continua su acción, después de absor- vida mecánicamente el agua suficiente y correspondiente con las necesidades de la semilla, lo quase hace manifiesto por el aumento de su tamaño y porque se pone mas blanda, principia entonces su vida propia el feto vejetal, y el ser nuevo dispertándose sale poco á poco de su letargo, pero careciendo todavía de los órganos á propó- sito para sacar su alimento de afuera, le halla preparado y apro- piado á su debilidad en el endospermo ó en los cotiledones cuyas OEGANOGEAFÍA. — DE LA GEKMINACION. 135 materias constituyentes han esperimentado metamorfosis sucesivas para volverse solubles y tales como las necesita para su prim.er des- arrollo. Los fenóm.enos físicos que se observan entonces después del aumento general y notable de la semilla consisten en que se revienta el epispermo,la raicita se presenta al esterior, se alarga con mucha prontitud v penetra en el suelo, en donde, sencilla al salir de la se- milla, no tarda en ramificarse, nacen sus chupadores j comienza su papel el tallito se alarga en sentido contrario y los cotiledones sa- len fuera de la tierra j, apartándose poco á poco j gradualmente el uno del otro, aparece la vemecita j las primeras hojas se desarro- llan con una prontitud maravillosa en ciertos vejetales, como en las habichuelas. ¿Pero qué habrá sucedido para que tales cambios físicos se mani- fiesten, y que el recien nacido haya podido principiar á desarrollar- se y á vejetar? En tal caso, bajo la influencia poderosa que la pre- sencia del ser nacedero tiene sobre las varias partes que constituyen la semilla, ó bajo la influencia vital ó catalítica del embrión vuelto feto vejeta! naciendo, las sustancias puestas en depósito en los coti- ledones j en el endosperm.o, según la cíate con que corresponde la semilla, esperimentan ciertas reacciores químicas sucesivas y aná- logas á las señaladas mas arriba al hablar de la nutrición en los ve- jetales, pero quizás menos perfectas y menos complicadas, porque tienen lugar entre los elementos de unas sustancias orgánicas y formadas que han solamente que volverse otras ó de sufrir algunas metamorfosis después de las cuales salen mas á proposito para cum- plir con su objeto, mientras que las primeras se verificaban entre los elementos ó moléculas de unos cuerpos inorgánicos solicitadas por la fuerza vital á entrar en nueves agrupamientos de los cuales debia salir la molécula orgánica para formar mas tarde los varios órganos que tienen que desemipeñar las varias funciones cuyo juego ó cumplimiento regular y normal constituye la vida vejetal. Las sustancias contenidas pues en los cotiledones ó en el endospermo son principios inmediatos vejetales por la mayor parte insolubles en el agua y por consiguiente capaces de conservarse en depósito bastante tiempo sin dañarse, pero por esa misma razón incapaces en su estado normal de estar absorvidas y por consiguiente de servir así á la ali- mentación del recien nacido ó del ser nacedero, pero sí con el con- curso del agua, del oxíjeno de la atmósfera y de cierto grado de calor son susceptibles de volverse solubles y por consiguiente alimen- ticios. Tales principios son generalmente el almidón ó fécula, la sustancia córnea del endospermo ó celulosa, unas sustancias grasas ó aceitosas, la albúmina, la fibrina vejetal y demás materias; to- cante á las sustancias oleosas ó aceites que contienen las semillas, si estuvieran absorvidos así en su estado normal matarian el feto ve- jetal, pero después de haber sufrido sus elementos las reacciones y metamorfosis sucesivas y necesarias se transformarán en sustancias solubles alimenticias. Todo eso puesto, agua y oxíjeno absorvidos, los diferentes principios que contiene la semilla bajo la influencia del calor y de la electricidad, siendo formados también de oxíjeno, hi- drójeno, carbono y algunos de ázoe en proporción gue varia según 136 BOTÁNICA. ELEMENTAL. SU clase, esperimenta reacciones químicas ó metamorfosis que ha- cen encontrarse sus elementos al estado naciente con el oxíjeno at- mosférico j con los elementos del agua, y entonces se agrupan de otra manera sus moléculas y se vuelven glucosa, goma, carbonato de amoniaco, ácido carbónico y acético; la glucosa y las materias gomosas absorvidas entonces alimentan al recien nacido : véase para mayor inteligencia y esplanacion del particular, el Discurso prelimi- nar, páj. 28. Entre el frió que hiela y el calor que deseca hay una multitud de temperaturas propias para la germinación de las diversas semillas, porque difieren mucho en cuanto al grado de calor que exijen para germinar, cuyo mínimo es siempre muy superior á cero para cada una, y el aumento de calor acelera la germinación ventajosamente, no llegando á ser mucho, porque en este caso las plantas resultan débiles y mal nutridas ; comunmente necesitan mas las semillas de las plantas de los paises cálidos, así como las gruesas ó cuya consis- tencia es carnosa, mientras que las mu}^ pequeñas germinan fácil- mente y con poco calor. Durante la germinación daña la buperabun- dancia de agua, porque ocasiona la putrefacción de las semillas, y en ese concepto es muy favorable el buen suelo por cuanto modera los efectos perjudiciales de la demasiada humedad ; además facilita el contacto del aire cuando no es ni demasiado compacto ni dema- siado lijero. Las semillas deben enterrarse en el suelo tanto menos cuanto menores sean: en los terrenos lijeros deben quedar todas ellas á mayor profundidad, respecto de la conveniencia, que en los compactos, y han de sembrarse superficialmente en los muy húme- dos, mientras que en los muy secos han de cubrirse mas. El tiempo que las semillas, bajo el influjo de los ajentes ordinarios, neces.itan para germinar difiere mucho según las especies : algunas germinan en un dia ó dos, otras en pocos mas; tardan una semana la mayor parte de las gramíneas, otras un mes, algunas especies hay que ne- cesitan un año y otras hasta dos ; aun respecto de las semillas de igual especie varia el tiempo necesario para la germinación, según las circunstancias en que durante ella se hallan y particularmente según los grados de calor y humedad bajo cuya influencia se verifica. Circunstancias anteriores á la germinación hay que pueden acele- rarla ó retardarla, tales como el grado de desecación de las semillas y el tiempo que tienen, fundándose en esto la práctica de ponerlas á remojo por algunos dias, cuando están muy duras ó son viejas. La grande tardanza proviene generalmente de ser muy duros los tegu- mentos de las semillas ó de hallarse revestidas de un endocarpio leñoso, que necesita mucho tiempo para ser destruido. Sustancias hay que aceleran mucho la germinación de las semillas, tales son la disolución de cloro, los ácidos nítrico y sulfúrico convenientemente diluidos, el iodo, el bromo, los ácidos fosfórico, tártrico, benzoico, cítrico, oxálico, acético, etc., mientras que los álcalis tienen una acción contraria : así es del ázoe, etc. La conservación de las semi- llas depende de su grado de madurez, siendo lo mejor que esta sea completa, y también favorece mucho que se hallen protejidas por involturas secas y duras, que se opongan al influjo de los ajentes es- ORGANOGEAFÍA. — ^ DE LOS FRUTOS. — GENERALIDADES. 137 teriores, así como las blandas y pulposas pueden ser perjudiciales en cuanto facilitan la putrefacción. Bien maduras las semillas se conservan largo tiempo capaces de germinar, siempre que se hallen privadas del contacto del aire j de la humedad ; entonces se para la yida sin apagarse sin embargo : por eso en ciertos paises se las suele enterrar á una gran profundidad en cavidades dispuestas á propósito, llamadas silos. Su conservación espontánea se observa con bastante frecuencia en la naturaleza, porque se hallan en profundidad ó en paraje donde falta alguno de los ajentes indispensables para la ger- minación, y así se esplica la aparición de algunas plantas en terre- nos removidos, ó en lugares desmontados que casi siempre se cubren de una vejetacion nueva diferente de la que antes existia en ellos. La facultad de germinar dura efectivamente mas ó menos, según las especies : las hay cujas semillas nacen aun después de muchos años, y otras, al contrario, se inutilizan muv pronto, tales como las del café, del cacao, de la serapia, del monodora mirística, etc. CAPITULO III DE LOS FRUTOS EN GENERAL. El pericarpio, solo ó con las partes que pueden adherírsele, crece á la vez que los huevecillos, pero no siempre es precisa la fecunda- ción de estos para que se desarrolle el fruto, y puede hacerlo en muchos casos de aborto de las semillas con ventaja, respecto del ta- maño, como sucede en las pinas, en los plátanos y otros frutos culti- vados, ó con disminución de él, como sucede en la vid de Corinto. Atraen los frutos una gran cantidad de savia desde que cuajan y empiezan á crecer hasta alcanzar la madurez, que llega mas ó me- nos pronto y varia considerablemente, según las especies; tardan, en efecto, pocos dias los de algunas, meses los de otras, un año ó algo mas los de varias, sin guardar relación con el tamaño ú otra cualquiera circunstancia apreciable, aunque en general á la flores- cencia tardía parezca corresponder una mas rápida maduración. Es lo mas común que los frutos maduren dentro del mismo año de su aparición, pero los hay que no lo hacen hasta el siguiente, como se observa en varias coniferas. El tamaño y aun la calidad de los fru- tos de muchos árboles están en razón inversa del número, siendo por tanto muy conveniente disminuirlo oportunamente, cuando pa- reciere esccsito. La madurez es el resultado de los cambios quími- cos que en los frutos se verifican bajo el influjo de los ácidos en ellos, existentes y del calor atmosférico : véase en el Discurso preliminar la esplicacion de esos fenómenos, páj. 37. El color, tamaño y forma de los frutos carnosos varian muchísi- mo ; su sabor y consistencia se diversifican también asombrosamente según las especies y variedades, siendo en las células del parénqui- ma de los mismos frutos donde los jugos se elaboran y adquieren las cualidades de cada especie ó variedad, que además dependen de la 138 BOTÁNICA ELEME^^TAL. naturaleza de las materias rcarreadas por la savia, y de la acción de las circunstancias atmosféricas. Estas sobre todo ejercen un co- nocido inflnjo,yá ellas se deben las notables diferencias que ofrecen unos mismos frutos, según los años y las localidades. El calor es causa muy principal de la buena madurez de los frutos, llegando á ser mas ó menos azucarados, según su mayor ó menor intensidad, que acompañado de la luz produce al mismo tiempo la coloración total ó parcial de ellos. El esceso de humedad, que puede provenir del clima, suelo ó año en que se verifica la fructificación y también de la demasiada juventud de los árboles, se opone á la buena madu- rez de los frutos, y es incompatible con las cualidades de sabor y consistencia apetecibles, porque no se puede elaborar completamen- te en su parénquima una cantidad tan considerable de savia y mu- cho menos siendo muy acuosos. Por eso es favorable á la madura- ción cierto grado de sequedad en tiempo oportuno, y parece lo mejor que antes de la época próxima á la completa madurez reciban la suficiente humedad para que engruesen, y no así durante aquella, siendo entonces lo conveniente mas calor y menor agua. No es otro el fundamento de la práctica que siguen los cultivadores de arroz, retirando el agua al aproximarse el tiempo de la madurez. Com- préndese también por qué ciertos frutos maduran mejor separados de ios árboles con alguna anticipación, que permaneciendo sobre ellos. Algunas circunstancias especiales hay que apresuran la ma- duración de los frutos, consistiendo la mas común y natural en las picaduras de los insectos : sabido es, en efecto, cuánto mas pronto toman gusto los frutos atacados por ellos. Favorece también la ma- duración de los frutos la lentitud en el descenso de la savia y por consiguiente cualquier medio de moderar su movim.iento, si es de- masiado rápido ; tal resultado se obtiene mediante una incií^ion anu- lar de la corteza en la rama florida, lográndose al propio tiempo que cuajen los frutos en plantas poco propicias á ello. Dícese además que los frutos carnosos crecen mejor cuando se hallan sobre algún apo- yo, y que por otra parte les son favorables los sacudimientos que produce el viento. Los cálices permanentes y carnosos, los receptá- culos jugosos, y hasta los pedúnculos, que en consistencia y volu- men se asemejan á los frutos, esperimentan modificaciones pareci- das á las que se observan en la maduración de los frutos lejítimos, sean los higos, G. 111, los pajuiles, G. 991. Sean cuales fueren los frutos, se les ha de aplicar las varias cali- ficaciones del ovario, según el número de sus carpillos, la soldadura mas ó menos e&tensa de ellos, las celdillas que resultan, la situación de las placentas, etc. La l)ase, el eje y e\- ápice del fruto correspon- den también á iguales partes del ovario y como en éste hay que dis- tinguir el ápice orgánico del geométrico, porque el estilo puede en- contrarse lateralmente situado ó cerca de la base, y por consiguiente en uno y otro caso, lejos del punto mas alto que geométricamente es el ápice. Además de la cicatrícula estilar ó señal que en el fruto suele quedar después de haberse destruido el estilo, hay otra basi- lar ó correspondiente á la unión del fruto con el receptáculo, la cual se llama hilo cdrpico. Si el cáliz estuviere soldado al ovario conti- ORGANOGRAFÍA. — DE LOS FKUTGS. — GENERALIDADES. 139 nuará del mismo modo cuando este llegare á ser fruto, j también puede suceder que entonces contraiga alguna adherencia el cáliz antes libre ; se reconocerá siempre el cáliz adherido al fruto por la corona que sobre él forma la paite superior j libre de aquel, como en la granada, G. 1106, ó por la cicatriz circular que deja dicha corona cuando se desprende. Es simple el fruto cuando resulta del desarrollo de un ovario igualmente simple; comjJuesto si lo es el ovario de que se orijina ; midUplice ó multijjle cuando los varios carpillos de la flor permane- cen independientes unos de otros, aun después de haber adquirido todo su desarrollo, como en los ranúnculos, cabellos de ánjel, G. 417; siendo compuesto ó múltiple se llama simétrico ó asimétrico, según si tiene sus hojas carpelares en número igual al de los sépalos ó pétalos ó en númiero diferente, pudiendo el asimétrico seilo por esceso ó por defecto. También se pueda decir, como el ovario, regu- lar ó irregular el fruto, sea simple sea compuesto; pero la irregu- laridad suele aumentar en él con el mayor desarrollo, j por consi- guiente se hace mas notable á medida que adelanta la maduración. No se debe confundir, con el fruto propiamente dicho, sea simple, compuesto ó multíplice, el agregado de frutos pertenecientes á ñores distintas muy aproximadas, como son las pinas, G. 462, y las de morera ó del moral, G. 220. Todo fruto lejítimo es formado del pericarpio, que no es otra cosa mas que el ovario desarrollado, y de la semilla, que es lo mismo res- pecto del óvulo. Siempre que las semillas faltan por haberse caido ya, ó por aborto consiguiente á las alteraciones producidas á propó- sito ó no por el cultivo, se dice incompleto el fruto, y completo en el caso contrario. El pericarpio es siempre formado de tres partes diferen- tes bien distintas en los frutos carnudos, y soldadas entre sí en los secos, cuya esterior ó epidermis del fruto se llama epicarjño, la in- terior que limita la cavidad de la celda ó de las celdillas y también muy delgada aunque adherida algunas veces á la parte huesosa de la tercera se denomina endocar^ño, y en fin la tercera, mas ó menos espesa é intermedia, se dice sarcocarpio ó mesccarpio, que constituye la parte comestible de los frutos carnudos, cuya porción mas inte- rior se vuelve á veces huesosa . las ciruelas de Europa, las guindas, G. 1024; el mango, G. 2*73. El pericarpio es seco en unos frutos y carnoso en otros; el primero, según su consistencia se ha denomi- nado mcmhranáceo, papiráceo, apergaminado, coriáceo, crustáceo, huesoso, leñoso, acorchado j fhrvso ; la del segundo, variando mu- cho menos, se dice solamente y?í^050 ó suculento cuando en él pre- dominan los líquidos; hay además otros grados intermedios de consistencia que no han recibido denominaciones particulares. Conte- niendo el pericarpio una sola semilla puede soldarse con ella durante la madurez, como sucede generalmente en las gramíneas; por esta razón se ha llamado semilla desnuda á todo fruto cuyo pericarpio muy delgado no se conserva separado- de ella; entendiendo esta de- nominación á los frutos de. las umbelíferas, borrajíneas, labiadas, etc., F 149, 66, 76, que no son mas que partes de frutos, nrias bien que frutos enteros, y que han recibido el nombre de mericarpio ; 140 BOTÁNICA ELEMENTAL. pero esceptuando las cicádeas y las coniferas, F. 33, 34, 35, no hay familia alguna cuyas plantas tengan las semillas al descubierto, y las que lo parecen son verdaderos frutos pseiidospermos. Los tabi- ques lejílimos son verdaderas dependencias del pericarpio, y se dis- tinguen de los espurios en el fruto como en el ovario; son tan deli- cados en ciertos frutos que desaparecen muy temprano, de modo que se les puede llamar fugaces ó evdnidos. Algunos de los tabiques espurios se forman durante la madurez, y quizás suceda así respecto á todos los transversales ú horizontales, como en las casias, G. • 1029, comparando sus frutos y ovarios. El fruto formado de un carpillo único tiene dos junturas ó sutu- ras, la dorsal ó esteriorj la ventral ó interior, que existen constan- temente en el fruto simple, pero no sucede así para la dorsal. Cuan- do proviene de un ovario compuesto las suturas ventrales no son visibles al esterior, aunque existan, mientras que pueden distin- guirse tantas dorsales como carpillos, á no ser que alguno de ellos carezca de sutura dorsal, ó no la tenga marcada. Las suturas llama- das parietales resultan de la unión de los carpillos entre sí, y por consiguiente son en número igual al de estos, pudiéndose reconocer tanto mas fácilmente cuanto menor es la ostensión de la adherencia. Estando el cáliz adherido al fruto tienen que desaparecer las sutu- ras, pero suelen existir otras debidas á los nervios de las hojas calicinales. Las placentas se desecan ó endurecen y hasta llegan á desaparecer cuando el fruto es seco ó tiene hueso ; pero siendo ente- ramente carnoso so llenan aquellas de jugo y aumentan su volu- men : son entonces comunmente mas blandas que el pericarpio, y las semillas se haWan anidadas en su masa, como en los tomates, G 624, las guayabas, G. 1112, las sandías, G. 193. La sustancia de que se forman, cuando es jugosa, y cualquiera otra que rodea in- mediatamente las semillas, toma el nombre de pulpa, distinguién- dola así de la carne del fruto ; las naranjas y limones deben su abun- dante pulpa á multitud de celdillas fusiformes que provienen de la superficie interior del pericarpio, y se llenan de jugos creciendo hasta ocupar enteramente las celdas. La pulpa varia mucho en los diversos frutos que la presentan, tanto respecto á la consistencia como relativamente á sus cualidades : la caña fistola, G. 1005, los tamarindos, G. 1039, los frutos del cacao, G. 923. Los frutos varian muchísimo y á veces las diferencias son tales, que hacen distinguir con facilidad los que pertenecen á plantas di- versas de las cuales son característicos. En cuanto al tamaño hay mucha variedad seguramente; pero no guarda constante relación con el de las plantas ni el de las flores tampoco ; la forma suminis- tra caracteres de importancia y se espresa por los términos de glo- boso, aovado, piriforme, apeonzado, oblongo, cilindrico ó rollizo, linear, alesnado, el fruto, y según si esta aplastado lateral ó verti- calmente se dice comprimido ó deprimido, puede ser también arri- ñonado ; si en lugar de ser redondeados sus contornos son angulosos se le llama tri, cuadri, qiiinque, sexangular, según las circunstan- cias ; si se abulta de trecho en trecho se denomina toridoso y moni- liforme, ó en forma de collar cuando los bultos están separados por ORGANOGRAFÍA. — DE LOS FRUTOS. — GENERALIDADES. 141 estrecheces que le hacen parecer á una serie de cuentas de rosario ; según su dirección ha recibido el fruto los nombres de recto, ar- queado, falcifor me, vermicular, espiral y acaracolado \ atendiendo á \íx forma de su ápice ó de su base se dice escotado, truncado, re- dondo, oUuso, agudo, aguzado, umbilicado, mucronado, etc.; res- pecto á la superficie se califica de liso, punteado, tuberculoso, rerruy- goso, arrugado, reticulado, estriado, asurcado, escabroso, muricado 6 erizado, lampino, peludo, aterciopelado, pubescente, etc.; encresta- do, cornudo, alado^ según si los apéndices que presenta son crestas, cuernos ó alas, y con atención á su número se dice el fruto bi, tri, cuadri come, u/nialado Halado ó díptero, trialado ó tríptero, ciiadri alado ó tetrúptero, alado por el ápice ó alado por los lados. Modifi- cándose el limbo del cáliz adherente se orijina \?i corona, como en las mirtáceas, las guayabos y granados, F. 133, 134 y el vilano, como en las compuestas y valeriáneas, F. 59, 60; entonces el fruto recibe las denominaciones de coronado y de vilanoso ; se dice picudo y co- ludo cuando el estilo persistente se endurece ó se cubre sin endu- recerse, pero alargándose, de pelo sedoso que le hace parecer una cola : el rábano, G. 828, la clemátida de la Habana, G. 417. De or- dinario los frutos no tienen olor, pero algunos suelen ser muy fra- gantes: la pomarosa, el ananas, etc., G. 1119, 1112, 462, y enton- ces puede ser un indicio de cualidades buenas ó malas. Algunas veces sin adherir al fruto persisten á su alrededor las invólturas formándole vestiduras mas ó menos duraderas, y enton- ces se dice desnudo ó vestido y por consiguiente involucrado ó cu- bierto; por lo común es el cáliz que forma á cada uno de los frutos su vestidura, contribuyendo á veces la corola y estambres ó estos sin aquella; como quiera, tanto el cáliz como la corola, en algunas plantas no persisten enteramente, mientras que en otras el cáliz continua creciendo y se eleva mucho mas que el fruto: la hernandia sonora, G. 142. Las vestiduras toman además en varias plantas co- lor y consistencia que no tenian en su oríjen, desfigurándose de este modo lo bastante para ser tomadas á primera vista por pericarpios, si no se recurre á la flor. Maduro ya el fruto y las semillas que contiene, se abre el pori- carpio ó se destruye en seguida, si no es permanente," porque enton- ces dura tanto como los tegumentos seminales, cuyo desprendi- miento se verifica solamente por la germinación. Se llama dehiscen- cia el acto de abrirse espontáneamente un fruto, y como todos no lo hacen se dividen en dehiscentes ó indehiscentes . No es obstáculo á la dehiscencia que el cáliz se halle soldado con el ovario, y propor- cionalmente hay de los frutos adherentes tantos que se abren como de los libres, pudiendo unos y otros presentar condiciones de tejido mas ó menos semejantes é incapaces de impedirla. La dehiscencia no es uniforme en todos los frutos y por consiguiente se verifica de diferentes modos : en muchas plantas los frutos simples se abren por la sutura ventral, en otras se efectúa la dehiscencia por la sutura dorsal, y se hallan también muchas en las cuales tiene lugar por una y otra sutura, como sucede en una multitud de leguminosas, F. 130. Se llama voXvas ó ventallas á la pieza ó piezas que suelen aparecer 142 BOTÁNICA ELEMENTAL. en el pericarpio después de abierto el fruto, sea simple ó compueato, y se dice uni, M, tri, onultivalve siempre que la dehiscencia no fue- re incompleta, porque en tal caS'(7/r^J//iV.^.l/S'."Grupo I: periantio siempre peta- loídeo del todo. F. 42: musáceas, musa, etc., G. 448, 447. Grupo II. Serie esterior del periantio á veces glumácea. F. 43 : zinjiberáceas, ^inr/iber, G. 478. — F. 44: canneas, canna, G. 481. Cl. XIV: ORQUIDIOIDEAS ó Aschidoblasteas. — Grupo I: 158 BOTÁNICA ELEMENTAL. GIKAXDROS. F. 45 : orquídeas, orcUs, G. 430, 434, etc. F. 46 : vanillíiceas, xanilla\ G. 422» Grupo II: AGINANDROS ó yejetales cuyos estambres no están nunca insertos sobre el pistilo y con él soldados. F. 47: burmaniá- ceas, hirmania. — F. 48: apostasieas, apostasia. Orden lY. En este se han agrupado los vejetales acuáticos des- provistos de periantio ó cuyo periantio único está alguna vez que otra petaloídeo ; semillas de endospermo tan pronto farináceo como córneo. Cl. XV: FLUVIALES. — Sub-órden I: exalbuminados ó aspa- dicifloros. — Grupo I: periantados. — Tribu I: monoperiantados. — F. 49: butomáceas, lutomus. — F. 50: potámeas , potamogetón. — G. 306. Tribu II: diperiantados. — Sub-tribu I: siempre hermafroditos. — F. 51: juncajíneas, trigolicliin. Sub-tribu 11: tan pronto hermafroditos como monoicos. — F. 52: alismáceas, sagittaria, G. 1*74, 898. Sub-tribu III : siempre monoicos ó siempre dioicos. — F. 53 : naiádeas, necias. — F. 54: hidrocharideas, hydrocharis. Sub-órden 11: aperianteos. — F. 55: zosteráceas, 'zostera. Sud-órden III : albuminados y espadicífloros. — F. 56: pistiáceas, pistia, G. 154. — F. 57: lemnáceas, lemna, G. Sección II: DICOTILEDÓNEOS.— Sub-seccion I: GIMXOSPER- MOS, es decir cuyos óvulos ó semillas son desnudas ó sin ovario que las contenga. Cl. Xvf: CONIFERAS. — F. 58 : abietíneas, jnnus, G. 105.— F. 59: cVi])reameas,jtínÍ2Jencs, G. 103. — F. 60: taxíneas, taxus. — F. 61 : gnetáceas, ephedra. Cl. XYII : CICADOIDEAS. — F. 62: cicádeas, mmia, G. 231. Sub-seccion II : anjiospermeos, ó cuyos óvulos ó semillas están siempre contenidas en un ovario cerrado. SÉKiE la. — Apétalos. Orden I: aperianteos. — Sub-órden I: hipójinos. Cl. XYIII : PIPERINEAS. — F. 63 : piperáceas, artante, G. 315, 316, 311. — F. 64: saurureas, saururns. Cl. XIX : TJRTICINEAS. — F. 65 : urticáceas, urtica, G. 249. — F. 66: artocarpeas, artocarpus, G. 113, 114. — F.67: morcas, moms, G. 136, 220.— F. 68 : celtídeas, celtis, G. 272. — F. 69 : cannabíneas, cannalis. — F. 70: platáneas, platanus. Sub-órden 11: períjinos. — Cl. XX: AMENTÁCEAS. — Grupo I: exalbuminados. — F. 71: juglándeas,y^í^/í^?^5, G. 140. — F. 72 cupulíferas, quercus. — F. 73: salicíneas, salix^ G. 213. — F. 74 betulíneas, hetnla. — F. 75 : miricáceas, myrica^ G. 214. — F. 76 casuaríneas, casuarina, G. 211. Grupo 11: albuminados. — F. 77: balsamífluas, Uquidamiar. Orden II: perianteos. — Sub-órden I: epíjinos. Grupo I : ginandros. — Cl. XXI : ARISTOLOQIA CEAS. — F '78: arjstoloquieas, aristolochia, G. 420. TACSONOMÍA. — MÉTODO PARA ESTA OBRA. 159 Grupo II: aginandros. — Cl. XXII: ASARINBAS. — 'e. 79: ci- tíneas, citinus. — F. 80: azareas, asarími.- Sub-órden II: períjinos. — Grupo I: albuminados. Cl. XXIII : BALANOFORIXEAS. — F. 81 : balanofóreas, G. 164, 165. — F. 82 : apodanteas, ai)oclantlica. — F. 83 : raflasieas, rajlasia. — F. 84 : nepenteas , ne])entlie8. — F. 85 : hidnoráceas, Mclnora. Cl. XXIV: SANTALIlSiEAl^. —Y . 86 : santaláceas, santahm. — F. 87: olacíneas, olax. — F. 88: ioránteas, lonintlms, G. 233, 234. Grupo II : exalbuminados. — Cl. XXVj DAFNOIDEAS. — F. 89: lauríneas, cinnamormirn, persea, G. 352, 224. — F. 90 : hernan- diáceas, liernancUa, G. 142. — F. 91 : cirocarpeas, cyrocarpiis. — F. 92: tirnéleas, da2)hno])sis , G. 218. — F. 93 : anterospermeas, antlie- rospermum. Cl. XXYI : PROTINEAS.— Y. 94: proteáceas, ^^ro^g^í.— F. 95: eleagneas, eleagmcs. — F. 96: aq^uilaríneas, aquilaria. — F. 97: pe- neáceas, j9^;¿^ Grupo II: OLIGOSTEMONOS, ó vejetales cujas flores tienen or- dinariamente pocos estambres y en número determinado. % I : UNISEXUALES.— Cl.LIII: CROTONINEAS. — ^. 199: euforbiáceas, eitpJiordia, etc., G. 132, 144, 141, 135, 146, 134. § II : HERMAFRODITOS. — Cl. LíY: POLiaALINEAS. -Y. 200: vocliisieas, pockisia. — F. 201: tremándreas, tremandra. — F. 202 : poligáleas, 2^oly(jala, G. 914,'916. — F. 203: kramerieas, Ira- tltCTÍCL G. 91o. Cl. hY-:GERANIOIDEA>'í.—F. 204: oxalídeas, oxalis, G. 846, 949. — F. 205 : líneas, Umim./—Y. 206 : limánteas, Umanthus. — F. 201: topoeóleas, tro])oeolumAj. 843. — F. 208 : balsamíneas, balsa- mina.— F. 209: ííeraniáceae, geranmm. Cl. LYI: RTJTINEAd—^. 210: coriarieas, coTiaria.—Y . 211: ochnáceas, ocluía. — F.yél2: simarúbeas, simaricha, etc., G. 864, 865, 212. — F. 213 : ciia4)arieas, cusparía, G. 836. — F. 214 : dios- meas, moiviúera, G. 660. — F. 215: rutáceas, rutaj G. 839. — F. 216: zigofíleas, zijgophyllicm , etc., G. 860, 861. : — F. 211 : zantoxíleas, zanthoxyllum, G. 22íy, 834 Ms. Cl. LVII: HESPBRIDINEAS.— ^. 218: liesperídeas ó auran- ciáceas, citrus, G. 917, 866. — F. 219 : olacíneas, ximenia, G^ 842. — F. 220: meliáceasjm^/z¿í, etc., G. 941, 929. — F. 221: triquilieas, triquiUa, G. 931, 932. — F. 222 : cedréleas, cedrela, etc., G. 942, 943. — F. 223: eritroxileas, erytroxylon , G. 950. Cl. LVIII : AESCULINEAS. — 'P. 224: malpigliiáceas, maJpi- (fliia, G. 948. — F. 225: aceríneas, acer. — F. 226 : hipocastáneas, aesGulus. — F. 221 : sapindáceas, sa2ñnd2is, etc., G. 853, 848, 854. División II: PERIJINOS.— Sección I: PERI-HIPOJINOS, ó cuya inserción de los estambres está tan pronto hipójina como períjina, de manera que no rara vez se halla ambigua. Cl. LIX: CELASTROIDEAS. — F. 228 : ampelídeas, vitis, G. 815, 818. — F. 229 : evonímeas, evonymus. — F. 230 : celastríneas, celastrum. — F. 231: estafíleas, staphylea. — F. 232: hipocrateáceas, Tiiwocratsa G. 984. Cl. LX: RHAMNOIDEAH. — Y. 233 : rhamneas, coluhina, G. 1193, 1145 bis. Sección II: EUPERIJINOS. — Sub-seccion I: EXALBUMINA- DOS, ó vejetales cuja semilla está sin endospermo. TASCO^^ÜMIA. MÉTODO PAEA ESTA OBRA. . 163 Orden I : placenta central ó axil. — Cl. LXI : TEREBENTI- NEAS.—t. 234: burseráceas, hcrsem, etc., G. 996, 997.— F. 235: connaráceas, connarus. — F. 236: espondiáceas, spondias, G. 276, 273. — F. 237: sumacíneas, rhiís, G. 988. — F. 238 : amirídeas, amy- ris. G. 998, 997. — F. 239 : anacardiáceas, cuiacarcliuin , G. 277. F. 240: humiriáceas, htimirium. Cl. LWl: LECrUMININEAS.— ¥. 241: legumíneas ó fabá- ceas, cajanus, etc., G. 1065, 105^^, 298, 289, 1016.— F. 242: brow- neáceas, hroíonea, G.934. — F. 243: moringáceas, moringa, G 1001 Cl. LXIII : ROSINEAS.—Y. 244 : rosáceas, rosa, G. l]5i; 1024. — F. 245: chrisobaláneas, clirysohalamis, G. 1023. — F. 246 '. homalíneas, liomalium, G. 1149. Cl. LXIV: MIRTOIDEAS.—Y. 246 : calicánteas, calycanthus. — F. 247 : mirtáceas, ^5if/f?/.m, etc., G. 1112, 1114, 1122. — F. 248 : lecitídeas, lecythis.— Y. 249: granáteas, ^?í?¿¿cíí, G. 1106. • Cl. LXV: CENOTE RIÑE AS.— F. 250 : salicarieas, c%i])liea, G. 1022, 993. — F. 251 : melastomáceas, melastoma, G. 1021, 1090.— F, 252: memecíleas, memecyle. — F. 253: napoleóneas, napoleone. — F. 254 : rhizophóreas, i'Mzophora , G. 1149. — F. 255 : halorájeas, Mppuris. — F. 256: onagrarieas, y?íme?í^rí, G. 1092. — F. 257: com- bretáceas, terminalia, G. 270, 269. Cl. LVI : CUCÜRBITINEAS. —¥. 258 : cucurbitáceas, cucur- Mla, etc., G. 193, 191, 185, 193 bis. — F. 259: begoniáceas, begonia, G. 177. — F. 260: pangiáceas, liydnocarpe. — F. 261: nepenteás, ne- penthes. — F. 262: darticáceas, dartica. — F. 263: podostémeas,^o- dostema. — F. 264 : lacistémeas, lacistema. Orden II: PLEUROSPERMOS, ó de ovario cuva placenta es pa- rietal.—Cl. LXYII: PASIFLORINEAS.—F. 265 : \oé.^e?i^,ment- zelia, G. 1129. — F. 266: ribesieas, rihes. — F. 267: papayaceas, ca- oica, G. 204.— F. 268 : pasiflóreas, passiflora, G. 1085.'^ — F. 269 : samídeas, samyda. — F. 270 : turneráceas, tiirnera, G. 819. Sub-seccion II : ALBÜMIXADOS. — Orden I : CICLOSPERMOS ó de semilla cuto embrión está enroscado al rededor del endosper- mo.— Cl. LXVÍII: CACTOIDEAS.—Y. 271: cácteas, cereus. etc., G. 1102, 1103, 1104. —F. 272 : mesembrientémeas, mesemhiente- nvnr)!/ C1."lXIX: CARIOFILINEAS. — Y. 273: cariofíleas, dryma- ría, G. 780 5i5. — F. 274: portulacáceas, ^or^^/r¿crí, etc., G. Í121 381. ' Orden II : AXOSPERMOS.— Cl. LXX : SAXIFRAJINEAS.— F. 275: francoáceas,/rrt/¿coíí. — F. 276: saxifrájeas, «Jí^a^z/ríi^/rt. — F. 277: hidránjeas, hortensia. — F. 278: cunnoniáceas, cunnonia. — F. 279: escalonieas, scalonia.- — F. 280: ñl^délieas, pkyladelpkiis. Cl. LXXI: CRASULINEAS.—F. 2Sl: crasuláceas, Iryopliy- Ihtm, G. 677. — F. 282: cefalóteas, ceptlialotus. Cl. LXXII : HAMAME LINEAS.— Y. 283: hamamelídeas, lia- friamelis. — F. 284 : alanjieas, olanjia. — F. 285 : gumeriáceas, gify- meria. — F. ?86: bruniáceas, bruma. Sección III: EPIJINOS.— Cl. LXXIII: UMBELIFERINEAS. — F. 287 : umbelíferas ó umbeladas, daiccics, etc., G. 1137, 1143, 164 BOTÁNICA ELEMENTAL. » 1140. — F. 288 : eringieas, eryngium, G. 1131. — F. 289 : hidrocoti leas, hydrocotyle, G. 1132. — F.290: araliáceas, aralia. Hemos seguido para nuestra Flora ese método, solamente nos he- mos visto precisados á omitir algunas clases j muchas familias, por no suministrar nada al arte de curar ni á las artes tampoco, de tal suerte que los números de las clases y los de las familias son dife- rentes. MÉTODO analítico Y DIGOTOMIGO PARA CONSEGUIR CON MAYOR FACILIDAD LA DETERMINACIÓN Ó EL NOMBRE BOTÁNICO DE LOS VARIOS GÉNEROS DE PLANTAS DE QUE SE TRATA EN EL COMPENDIO DE TERAPÉUTICA YEJETAL DE LAS ANTILLAS Y DE LA PARTE CORRESPONDIENTE DEL CONTI- NENTE AMERICANO. 1. Yejctales fanerógamos ó de flores visibles, cuyos órganos sexuales se pueden estudiar casi sin valerse de la lente ó del mi- croscopio, 2. — Vejetales agamos, criptógamos ó acotiledóneos, ó sin flores lejítimas, ó cuyos órganos que las reemplazan no se pue- den observar ni estudiar sin emplear una buena lente ó el micros- copio, 6. 2. De flores separadas ó solitarias; estambres de ordinario libres y raras veces soldados entre sí por las anteras, 3. — De flores com- puestas ó reunidas en número variable sobre un receptáculo común, contenidas en un involucro formado de hojuelas ó de escamas mas ó menos numerosas y dispuestas por series; anteras casi siempre reunidas ó soldadas entre sí, 719. • 3. Hermafroditas ó unisexuales y rarísimas veces polígamas, 4. — Tan pronto hermafroditas como polígamas , monoicas ó dioicas, 251. 4. Siempre hermafroditas, 5. — Siempre unisexuales, 84. •5. Completas, es decir provistas de las dos cubiertas florales, cá- liz y corola bien distintas, y de los dos órganos sexuales, estambres y pistilo, 465. — Incompletas, sin ninguna cubierta floral y desnudas ó con una sola cubierta floral, á veces reemplazada por escamas, 295. 6. Agamos ó criptógamos : vejetales desprovistos de flores, sin hojas ni tallo bien manifiestos, pero sí provistos de un thallus ó ta- lludo y formados de una sustancia homojénea celular, sin órganos bien manifiestos ó particulares, 1. — Con hojas y tallos mas ó menos bien caracterizados y exójeiios ó endójenos, 36. 7. Siempre acuáticos ó viviendo en lugares muy húmedos, fila- 166 MÉTODO DICOTÓMICO. nientosos, filiformes, lameliformes ó foliáceos, provistos de una fronde; mas ó menos coloridos, propagándose por zoosporos, espo- ros coloreados ó por tetrasporos; alimentándose por toda su superfi- cie del medio en que viven j pegados al suelo ó á las rocas á favor de garras, 9. — Nunca jamás acuáticos lejítimos j viviendo en el aire del cual sacan su alimento por toda su superficie ; tienen un talludo,- 8. 8. Fungosos, pulverulentos, vejigosos ó con fluecos, crustáceos ó carnosos, de forma, tamaño y semblante muy variados; viviendo en el suelo ó como parásitas sobre los A^ejetales y á veces los animales, ó saliendo íle las sustancias orgánicas en descomposición sea princi- piante sea .ya bastante avanzada; nunca jamás verdes, pero sí bru- nos ó coloridos ; propagándose por esporos sin color ó brunos inte- riores ó esteriores y desprovistos de gonidias verdes, 18. — Con frondes de forma muj^ variada, vivaces, crustáceos, pegados en la tierra ó en los demás vejetales por medio de fibrillas celulares; multiplicándose por esporos ordinariamente encerrados en odres ó sacos ocupando espacios limitados y entremezclados con gonidias verdes, 29. 9. Cuerpos cristalinos, angulosos, fragmentarios, cerdosos, y cu- ya multiplicación ó propagación se verifica por espontánea separa- ción de sus propias sustancias, F. 1, S.-F. 1 y 2- — Nunca cristali- nos pero celulares, vasculares ó tubulares, 10. 10. Vasculares, filamentosos ó membranosos, propagándose por zoosporos, formados en su interior á espensas de la sustancia verde, 13. — Celulares ó tubulares, 11. 11. Celulares ó tubulares, pero nunca simétricos, 12. — Siempre tubulares únicamente , con ramitas ó brazos simétricamente dis- puestos, multiplicándose por medio de núcleos dispuestos á manera de espira y llenos de una sustancia sebácea: caráceas. 12. Propagándose por esporos simples formados esteriormente, 15. — Multiplicándose á favor de tetrasporos, 17. 13. Una fronde membranosa, llana ó tubulosa, verde ó purpuri- na, formada de uní* sola ó de algunas capas de utrículas justapues- tas; esporos ó zoosporos con frecuencia cuaternarios : ulxa, F. 1, S.-F. 3, T. XIII.— NinguDa fronde, 14. 14. Células globosas ó elípticas agrupadas por series filiformes, simples ó ramosas y reunidas dentro de una masa mucilajinosa di- versamente conformada ; viven sobre la tierra húmeda : nostoc, F. 1, S.-F. 3, T. 111. — Filamentos simples ó ramosos articulados; gq¿- nidias verdes, color de aceituna ó brunas; esporos simples nacidos de la concentración de las gonidias, de un solo endocromo ó de los dos endocromos vecinos : confería, F. 1, S.-F. 3, T. IX. 15. Aerocistos ningunos ; fronde continua, membranosa ó plana, las mas veces ñabeliforme ; esporos esteriores esparcidos ó agrupa- dos en soros y acompañados ó no de parasporos ; dictyota, F. 1, S.- F. 5, T. XII. — Siempre ó frecuentí.simamente provistos de aerocis- tos, 16. 16. Fronde célulo-filamentosa continua v color aceitunado; fre- cuentemente provistos de aerocistos que suelen faltar bastantes ve- YEJETALES CRIPTÓGAMOS. 167 ees; con concepiáculos esparcidos ó agrupados por el vértice de los ramos, pero nunca jamas reunidos dentro de un receptáculo dis- tinto de la fronde •.fiícv.s, F. 1, S.-F. 5, T. XI. — Aerocistos siempre presentes y dispuestos á manera de cadena ó contenidos en el inte- rior de la fronde, que es muy variada, ó distintos y pedunculados ; receptáculos distintos, simples ó ramosos, solitarios ó agrupados, axilares ó terminales : sargassum, F. 1, S.-F. 5, T. IX. 17. Frondes monosiíoneas, articuladas, raras veces celulosas; receptáculos desnudos ó involucrados ; tetrasporos frecuentemente salientes por afuera, color rojo mas ó menos oscuro : ceramiuní, F. 1, S.-F. 4, T. I. — Frondes continuas compuestas de celdillas re- dondeadas ó poliédricas; receptáculos esteriores : tetrasporos agru- pados ó agre^-ados con forma de manchas ó colocados- sobre esporo- filos : plocamümi, F. 1, S.-F. 4, T. X. 18. Un liimenion sea esterior v desnudo, sea interior v conté- nido en un peridio, 19. — Sin liimenion ó membrana fructífera al- guna visible, 27. 19. Himenion desnudo ; esporos generalmente cuaternarios, sos- tenidos por esporanjios distintos: hongos carnosos^ esponjosos, etc., y de forma mu^^ variada, 20. — Himenion ó membrana fructífera contenida en un peridio; esporos generalmente cuaternarios soste- nidos por esporanjios distintos; hongos mas ó menos redondeados, al principio cerrados y mas luego reventándose desigualmente, para que salgan los espórulos con forma pulverulenta ordinaria- mente, 26. 20. Himenion formado de láminas ó plegado, poroso ó sinuoso, subulado ó tuberculado, 21. — Himenion lampiño confluente con el receptáculo, anfíjeno y liso, pero nunca jamás laminoso, poroso, subulado ni tuberculado tampoco, 25. 21. Laminoso y plegado, 22. — Poroso ó sinuoso, subulado ó tu- berculoso, 23. • 22. Siempre laminoso : hongos perfectos con figura de paraguas, de sombrerillo masó menos redondeado, de color variado, convexo, sostenido por un pedúnculo mas ó menos largo ;" láminas verticales cubriendo toda la cara inferior del sombrillo y dispuestas á manera de radios desde el centro ocupado por el pedúnculo hasta la circun- ferencia, completas ó incompletas, con ó sin velo : agaricíis, F. 2, S.-F. 2. — Himenion plegado, cuyos pliegues son dispuestos á ma- nera de radios y ramosos, sub-paralelos ; sombrillo carnoso ó mem- branoso, sentado ó estipitado : cantlmrelliis, F. 2, S.-F. 2. 23. Himenion poroso ó sinuoso, 24. — Himenion subulado ó tu berculado, homojéneo y concreto con el sombrillo y como aguijonóse, cuyas puitas cerradas son libres ó reunidas por la base; ascijeros esteriormente ; hongos terrestres de sombrilla estipitada ó sentada, mas veces irregular : liydmim, F. 2, S.-F. 2. 24. Homojéneo con la sombrilla concretada, porosa, cuyos poros sub-redondeados y simples son ascíferos interiormente; hongos ter- restres ó parásitas, de sombrilla hemisférica, carnosa, blandita, con pedúnculo central á veces reticulado : doletus, F. 2, S -F. 2. 25. Hongos terrestres que parecen árboles en miniatura, mas ó 168 MÉTODO DICOTÓMICO. menos blancos; receptáculo derecho, cilindrico, homojéneo, confun- dido con el estipe ; himenion concreto superficial con los sacos su- perficiales, distintos y delgados : clavaria, F. 2, S.-F. 2. 26. Terrestres de ordinario, provistos de raicitas y sin pedúnculo bien manifiesto: lycoperdon, F. 2, S.-F. 3. 27. Esporos simples, frecuentemente tabicados, situados sobre esporóforos mas ó menos distintos, copos fructíferos mas ó menos pedunculados, 28. — Esporidias contenidas en odres y generalmente en número de 4; vejetales subterráneos y pareciendo como tubér- culos, casi globosos, mas ó menos parduscos, esteriormente lisos ó papiloso-verrugosos, indeliiscentes ; interiormente coriáceo-veno- sos y reticulado-venosos y casi de aspecto de marmol el corte : tu- her, F. 2, S.-F. 3. 28. Parásitas en las semillas ó en los ovarios fecundados de algu- nas gramíneas, cuyo germen destruyen y reemplazan, presentán- dose entonces con forma de masa sólida mas ó menos alargada ó hemisférica, cuj^os espórulos se hallan en el interior : S'permoedia, F. 2, S.-F. 3. 29. Núcleo ó thallus cargando con odres ó apetecías bien mani- fiestos, 30. — Núcleo ó thallus sin sacos ó apetecías tampoco visi- bles, pero al reventarse se presentan esporos desnudos ; thallus pul- verulento y núcleo coetáneo, F. 3, T. I. 30. Thallus homojéneo jelatinoso ó cartilajinoso, F. 3, T. II. — Thallus heterojéneo pulverulento ó celular, 31. 31. Duplo, cuyo primario es horizontal, crustáceo ó escamoso- foláceo, mientras el segundo es vertical y se vuelve como ramitas cartilajinoso-fistulosas ó huecas, todas subuladas ; apetecías libres, desnudas, con receptáculo propio ; orbiculares terminales ó esféri- cas, convexas y con figura de cabeza, sin ribete, pegadas por la cir- cunferencia, con los lados uniformemente hacia adentro ; cladonia, V.3, T.IV. — Thallus simple ó único, y receptáculo thaliforme, 31 ¿¿5. 31 ¿íz^. Horizontal, estendido desde el centro, diferente por la base, frecuentemente velludo ; receptáculo al principio connivente y por fin abierto, 32. — Thallus vertical-cosimile , receptáculo abierto desde el principio, 33. 32. Cartilajinoso y estendido por ambos lados, provisto de un hi- pothallus abultado; receptáculo con un disco subceráceo y provisto por la márjen de una membrana; apetecías con figura de escudo y horizontales : parmelia, F. 3, T. IV. — Foliáceo, velludo por debajo, sin hipothallus ninguno ; receptáculo con un disco carnosito inato y al principio dispuesto á manera de velo; apetecías peltiformes ; ve- jetales terrestres subiendo de entre los musgos : peltigera, F. 3, T. IV. 33. Thallus mas ó menos cartilajinoso, 34. — Thallus nunca car- tilajinoso ; vejetales criándose ordinariamente sobre la corteza de los árboles y que se presentan con forma de espansíones crustáceas, cilindricas y ramosas, con una especie de apéndice central filamen- toso; apetecías terminales ó abroqueladas ; receptáculo thaliforme, con disco semejante por la márjen : usnea, F. 3, T. IV. 34. Nunca jamás membranoso, 35. — Cartilajinoso y membranoso VEJETALES CRIPTÓGAMOS. 169 ala par; vejetales terrestres saliendo de entre los musgos; apote- cias con figura de escudo, pegadas oblicuamente en la márjen del thallus ; receptáculo thaloídeo teniendo por la márjen un disco por fin desigual : cetraria, F. 3, T. IV. 35. Thallus blandito esteriormente como estopóse ; apotecias es- cutiformes y marjinales; receptáculo thaloídeo llevando por la márjen un disco semejante : evemia, F. 3, T. IV. — Thallus tieso, planta que se cria sobre los peñascos marítimos ; apotecias escuti- formes y laterales; receptáculo propio con figura de cúpula, thaloí- deo y'llevando por la márjen un disco convexo, no semejante y por fin evanescente : Roccella, F. 3. 36*. Celulares ó vasculares, con las cajillas esporíferas sea inmer- sas en la sustancia de la fronde, sea encerradas en una especie de capucho con figura de gorra, 37. — Siempre vasculares, con las ca- jillas esporíferas nunca jamás inmersas en la sustancia de la fronde, ni envueltas tampoco por capucho alguno, 46. 37. Cajillas esporíferas, sin opérenlo alguno, pero casi siempre con un elaterio ó filamento en espiral echado entre los espórulos en el interior de ellas, 38. — Capsulitas esporíferas siempre provistas de un opérenlo, pero sin elaterio, 42. 38. Abriéndose por ventallas en un número definido é iguales ; yerbitas rastreras pareciendo musgos, con hojitas celulares cercan- do un eje central; otras veces la hoja y el eje se confunden para formar una espansion membranosa; cajilas esporíferas con 4 valvas ó 4 partidas, con ó sin columela central ; esporos entremezclados con los elaterios : jtmgermanieas, F. 4. — Cajillas esporíferas sin valvas, 39. 39. Siempre provistas de un elaterio, 40. — Sin elaterio siempre; yerbecitas acuáticas y nadantes, cuyas hojas y tallo se hallan con- fundidos en una especie de fronde celular, conteniendo las anteri- dias, cuya boca aparece al esterior con forma de papila ó de cono delgadito; pistilidias mono ó dioicas inmerj idas en su propia sus- tancia ó superficiales ; sentadas ó pedunculadas ; involucro coniun escamoso ó nulo; involúcelos nulos ó con figura de vejiguita aguje- reada por el vértice ; cajillas esporíferas unidas con la cofia ó dis- tintas de ella, globosas y reventándose desigualmente ; esporos triangulares ó piramidales : ricciaceas, F. 4. 40. Peltadas ó abroqueladas; rajándose por un solo lado, y con cada esporo provisto de su elaterio propio, 41. — Reventándose irregularmente ; yerbecitas estendidas sobre la tierra húmeda ó so- bre la corteza de los árboles, con figura de espansiones foliáceas ó membranosas ; cajillas esporíferas pedunculadas abriéndose por me- dio de grietas irregulares ó de dientes separados ; esporos globosos entremezclados con elaterios , anteridias inmersas en la fronda ó colocadas sobre receptáculos disciformes y sésiles ó abroquelados : marchancieas , F. 4. 41. Yerbas mas ó menos altas y ramosas, de tallo compuesto de artejos huecos ceñidos por una membrana envainadora y dentada, sin hojas ; fructificación terminal formando conos ó cabezas com- puestos del agrupamiento de escamas abroqueladas cuya cara infe- 1^0 MÉTODO DICOTÓMICO. rior carga con las cajillas esporíferas que se abren por medio de una grieta situada en su lado interno : equisetiim, F. 7. 42. Abriéndose por medio de valvas, 43. — Sin valva alguna, 44. 43. Yerbecitas ramosas que parecen musgos, rojizas ó parduscas, de hojitas imbricadas con ó sin costilla ; cajilla esporífera provista de un capucho con figura de gorra, sentada sobre una especie de tubérculo ó de apófisis espeso, rajándose lonjitudinalmente en cua- tro valvas iguales, de vértice reunido por el opérenlo persistente ; esporos pegados en derredor de una columna central : andráceas. 44. Musgos lejítimos ; pequeñas plantas herbáceas de eje cubierto de hojitas imbricadas enteras ó aserraditas : dos clases de órganos reproductores tienen : 1^ las anteridas, especies de sacos axilares, cilindricos ó fusiformes y pedicelados, conteniendo muchos corpús- culos esféricos ú ovales; 2Mas pistilidias, con figura de botella y encerradas en una bráctea enrollada y cabalmente situadas por en- cima de la punta de las cajillas esporíferas, sostenidas por una cer- da ó pedicelo y cubiertas por un capucho membranoso y cerrado por una tapa ú opérenlo, por debajo del cual se hallan apéndices tiesos y dispuestos en una sola ó en algunas series, y formando así el pe- rístemo, cuyos dientes son pocos, muchos ó solamente 4 y reunidos entre sí de varios modos ; por el centro de la cajilla hay una colum- nita y la parte que se queda libre está llena de esporos : F. de las Iryáceas, 45. 45. Caliptra ó capucho de base persistente y reventada por la parte mediana ; esporanjios situados por el vértice cortísimo de las ramitas, pedunculados, sin anillo; opérculo llano; boca abierta : es- fagndceas. — Caliptra circuncisa por la base ; esporanjios opercula- dos, anulares, indehiscentes ó abiertos, con el opérculo echado de lado ; boca variada : hriáceas. 46. Cajillas esporíferas axilares ó radicales, con una sola o con muchas celdillas y cuyos esporos son de dos clases, 47. — Cajillas esporíferas marjinales ó dorsales uniloculares y de ordinario ceñi- das ó rodeadas por un anillo elástico; esporos de una sola clase, 50. 47. Uni ó 3-loculares, axilares y con los espórulos de una sola clase ; plantas herbáceas muy bonitas anuales ó vivaces; alguna vez que otra fruticulosas, con muchísimas hojitas imbricadas y casi es- camosas, muy angulosas y todas semejantes, dispuestas por á 3 ó por á 4, cuyas laterales son mayores ; esporanjios de una sola figura ó de dos, cuyos farináceos son sub-reniformes ó algo arriñonados y con dos valvas, mientras los globulíferos son subgiobosos 3, 4 lobos ó con 3, 4 valvas, formando amentos cuyos últimos ocupan la parte inferior : lycopodium, F. 6. — Cajillas esporíferas radicales y multi- loculares, con los cuerpos reproductores de dos clases diferentes, 48. 48. Yerbecitas acuáticas con hojas pecioladas, á veces sentadas y escamiformes, enrolladas al nacer. Órganos reproductoreá encerra- dos en un involucro, los unos agrupados y pedicelados ó apiñados muchos, sentados y distintos de los otros, con que están entremez- clados ó en contacto y que consisten en cuerpos ovales, provistos á veces de un pezoncito terminal de donde sale la germinación : mar- siliáceas, 49. YEJETALES CRIFTÓGAMOS. 171 49. Prefoliacion de los peciolos en báculo; esporocarpios libres uniformes y con valvas. Yerbecitas detallo delgadito, filiforme, ras- trero y echando raices en los lugares de suelo anegadizo ; cujas ho- jas largamente pecioladas tienen fuera del agua su limbo compuesto de 4 hojuelas : marsilea. — Prefoliacicm nunca jamás en báculo; es- porocarpios de dos formas diferentes en el mismo tallito y situados cerca de la base de las hojas; yerbecitas nadadoras ramosas á ma- nera de pluma ó de estrella, cuyas hojas alternas son frecuentemente papilosas : salvinieas. 50. Cajillas esporíferas ó esporanjios provistos de un anillo, pero ni marjinales ni dorsales tampoco, 51. — Cajillas esporíferas sin anillo, marjinales ó dorsales, 77. 51. Sentadas sobre un receptáculo mas ó menos pronunciado, con anillo vertical ancho y escéntrico, conteniendo esporos triquetros ó trílobos; vejetales arborescentes mas ó menos altos, con semillante de palmeras, cuyas primorosas frondas que coronan su estipe son pinadas, bi-tripinadas ó bi-pinatíñdas, F. 5, T. lY., 52. — Nunca colocados los esporanjios sobre un receptáculo, pero pedicelados ó sésiles, 54. 52. Esporanjios saliendo del lado de una vena simple y formando soros ó grupos sub-red ondeados y esparcidos ; indusio pegado en el receptáculo por su parte inferior y por debajo, mientras la esterior es libre y por fin inclinado : liemitelia. — Esporanjios saliendo de la bifurcación de una vena ó de la parte mediana, 53. 53. Receptáculo globoso tí oblongo ; soros esparcidos ó por series á veces confluyentes; indusio formado de pelos ó de escamas laci- niadas : also'pMla. — Receptáculo siempre globoso; soros ó grupos hemisféricos ó sub-globosos ; indusio situado por debajo del recep- táculo, cerrado y por fin abriéndose por lacinias ó circunciso irre- gularmente : cyaíliea, F. 5, T. lY. 54. Esporanjios pedicelados provistos de un anillo vertical per- fecto: esporos redondos ú oblongos, F. 5, T. YI, 55. — Esporanjios sésiles, muy delgados y ceñidos por un anillo imperfecto ancho y á veces apenas notable, F. 5, T. YII. 55. Indusio ó escama membranosa, especie de camisa q^ie cubre mas ó menos los esporanjios y los acompaña, ó nula 56. — Esporan- jios siempre provistos de un indusio mas ó menos lejítimo, cuya forma y figura son variadas, 63. 56. Esporanjios situados sobre la cara inferior de las hojas, que la cubran ó no, pero nuiíca jamás saliendo de las venas ó de sus di- visiones, 57. ~ Esporanjios siempre colocados sobre las venas ó sus divisiones, 59. 57. Agrupados en la cara inferior ó algunas veces por ambas ca- ras á la par, que tienen mas ó menos cubiertas, pero nunca jamás situados sobre las venas ó sus divisiones ; tallo rastrero simple ó ramoso, con frondas temadas, pinadas ó tripinadas, pero las mas veces simples, cuyas fructíferas son semejantes á las demás ó mas estrechas y contraidas '. acrostichum . — Esporanjios situados por la cara inferior que no cubren y cuyos soros son dispuestos en líneas continuas ó interrumpidas, 58. 112 MÉTODO DICOTÓMICO. 58. Solitarios entre la costilla y la márjen, con que están para- lelos, j reunidos por la parte contraria á las venas ; tallo herbáceo, corto j de fronda simple : taenitis. — Marjinales j escondidos por las cerdas ó pelos de las frondas ; tallo herbáceo, corto, con frondas simples, pinadas ó tripinadas,*pelierizadas : notliocMena. 59. Saliendo de las venitas dispuestas en redecillas por la cara inferior de las frondas, cujas fructíferas son mas largamente pecio- ladas y menores que las estériles acorazonadas, palmeado-quinque- lobas, velludas y de cuyos senos salen yemas ; tallo herbáceo : he- onionitis. — Saliendo mas ó menos de las venas no dispuestas á manera de redecilla, 60. 60. Esporangios agrupados en soros lineares, 61. — Esporanjios nunca dispuestos en soros lineares, pero sí sub-redondeados ó con figura de semi-luna, 62. 61. U oblongos situados sobre las venas primarias ahorquilladas ó pinadas ; tallo herbáceo las mas veces abreviado, cuyas frondas compuestas ó descompuestas son raras veces simples, y frecuente- mente velludas, de dos colores y furfuráceas á la vez : gymnogram- me. — O sub-rotundos situados sobre las venitas ó sobre el brazo su- perior de las bifurcaciones ; tallos rastreros ó raras veces formando como cepas, de frondas simples intejérrimas ó repandas y pinatífi- das; rarísima vez bífidas ó pinadas : grammitis. 62. Soros algo semi-lunares situados sobre las venas transversa- les; rizoma rarísima vez de tallo arbóreo y recto, de frondas pina- das ó trifoliadas : meniscium . — Soros sub-rotundos y esparcidos ó dispuestos por series sobre las venas; tallo rastrero ó derecho las mas veces herbáceo , raras veces arbóreo, con frondas simples en- teras ó pinado-compuestas y descompuestas : polypodium, F. 5, T. I. 63. Indusio simple, 64. — Indusio doble : esporanjios situados en el vértice de las venas y formando soros marjinales sub-redondea- dos ; indusio lejítimo membranoso y continuándose con las venas, mientras el falso saliendo del lóbulo de la fronda cubre el primero. Tallo arbóreo derecho con frondas pinadas, bipinadas ó triplicado- pinadas : dicksonia, F. 5, T. I. 64. Lejítimo, 65. — Falso y redoblado sobre la márjen de la fron- da de donde nace; esporanjios saliendo de los ápices distintos de las venas y agrupados en soros sub-rotundos y aproximados á la márjen de las frondas; tallo herbáceo y rarísimas veces arborescente con frondas pinatífidas, bipinadas ó sobre-descompuestas : clieilantJies , F. 5, T. I. 65. Mas ó menos continuo con la márjen de la fronda, 66. — No continuo con la márjen de la fronda con la cual no tiene relación alguna, 68. 66. Adherido al receptáculo y libre interiormente; esporanjios saliendo de los ápices distintos de los venas y colocados sobre recep- táculos lineares ó puntiformes y agrupados en soros marjinales. Ta- llo herbáceo, las mas veces rastrero }' rizoma, con frondas compues- tas, sobre-descompuestas, rarísima vez simples, blandas ó coriáceas, lustrosas: adiantum, F. 5, T. 1. — Nunca adherido al receptá- culo, 67. VEJETALES CRIPTÓGAMOS. 173 67. Arrollado; esporanjios colocados sóbrelos ápices anastomo- sados de las venitas y agrupados en soros semilunares que se hallan en los senos de las frondas ; tallo herbáceo pelierizado ó aguijonóse, con frondas bipinatífidas, laciniado-festoneadas ó sinuadas : lonchi- tis, F. 5, T. I. — Nunca arrollado pero escarióse y abovedado ó no, 68. 68. Nunca abovedado, 69, — Siempre abovedado, escarióse y li- bre per la parte que mira á la costilla; esporanjios agrupados en soros lineares mellizos continuos y paralelos de cada lado de la cos- tilla. Tallo herbáceo, alguna vez que otra alto y arborescente, con frondas pinatífidas ó pinadas, rarísima vez simples, cuyas fértiles son casi conformes ó algo contraidas : hlechnum. 69. Membranoso ó avitelado, 70. — Escarióse y de base ancha ó pegado de la márjen y con el vértice libre esteriormente; esporan- jios situados sobre el ápice de las venas y en seros sub-redondeados y aproximados á la márjen; talle herbáceo rastrero ó derecho, con frondas simples pinadas ó descompuestas : davalUa. 70. Avitelado ó no, con des ventallas ó con una sola, 71. — Mem- branoso y abrazando la fronda, libre esteriormente; esporanjios si- tuados en el ápice de las venas y reunidos en soros continuos, con la márjen de la fronda que abrazan ; tallo herbáceo con frondas sim- ples pinadas ó descompuestas : Ihídsaea. 71. Avitelado y con una sola valva, libre interiormente ; esporan- jios saliendo de los ápices de las venitas , agrupados sobre receptá- culos nerviformes abrazando la márjen de la fronda y en soros mar- jinales por consiguiente ; vejetales de aspecto muy variado con rizoma ó con tallo derecho, alguna vez que otra arborescente, con frondas compuestas ó raras veces simples : pteris. — No avitelado con una sola ó con dos valvas, 72. 72. Con dos ventallas, sea lejítimas sea falsas, 73. — Nunca con dos ventallas, pero sí con una sola, 74. 73. Las dos valvas lejítimas y de igual testura que la fronda ; es- poranjios agrupados en soros lineares continuos y paralelos con la costilla ó la nervadura; frondas entejérrimas y lineares : vittaria. — Membranoso y saliendo lateralmente de la vena, connivente por encima de los soros y con dos valvas falsas; esporanjios situados so- bre los brazos de la bifurcación de las venas y agrupados en soros oblongos, mellizos por estar en los brazos contiguos de varias ve- nas ; frondas lanceoladas, acorazonadas ó alabardiformes y siempre enteras : scolo])e7idrium* 74. Esporanjios en soros arriñonados y situados en un seno de la fronda, 75. — Nunca jamás arriñonados los soros, ni situados tam- poco en un seno de la fronda, 76. 75. Sub-redondeados y dispuestos en series, formados por espo- ranjios colocados sobre un receptáculo saliendo de un crecido que se halla en la parte mediana de la vena ; tallo herbáceo de frondas pi- nadas ó bi-pinatífidas : nejphrodüim . — Soros sub-globosos formados de esporanjios situados en un receptáculo proviniendo del ápice abultadito del brazo superior de las venas ; tallo rastrero con fron- das pinadas ó bipinadas : nepho'olepis . 174 MÉTODO DICOTÓMICO. * 76. Indusios redondeados, abroquelados, libres por la márjen y continuos con el receptáculo; esporangios colocados sobre un recep- táculo columnar formado por el abultamiento del ápice ó de las anastomosis de las venas y agrupados en soros sub-redondeados es- parcidos ó dispuestos por series; vejetales de semblante y aspecto muy variados : aspiditim. — Indusios nacidos de la vena, tan pronto confluentes entre sí como libres; esporanjios situados sobre venas bifurcadas ó dicótomas y agrupados en soros lineares mellizos, cerca délos brazos de las venas; tallo rastrero ó derecho, alguna vez que otra arborescente, con frondas simples pinadas ó bipinadas : dipla- úum. 77. Las mag veces dorsales ó raramente apanojadas, 78. — Siem- pre marjinales y situadas sobre una vena que se va dilatando á lo largo del borde de la fronda; anillo horizontal completo; esporos convexo-tetraedros ; esporanjios sentados sobre una columnita fili- forme formada por la vena prolongándose algo mas allá que la már- jen de la fronda, ceñidos por un indusio continuo con la fronda y ciatiforme: yerbecitas de tallo rastrero ó rizoma con frondas espar- cidas ó agrupadas, lobadas, pinadas ó descompuestas : tricliomanes y F. 5, T. II. 78. Siempre dorsales y nunca apanojadas, 79. — Tan pronto dor- sales como apanojadas y pediceladas; anillo ancho, dorsal é incom- pleto, abriéndose por el vértice; esporos redondeados ú oblongos; indusios variados; frondas bipinadas, cuyas fértiles son con mayor frecuencia reeojidas : osmunda, F. 5, T. III. 79. Anillo completo, ancho, estriado, transversal ó sub-oblicuo, abriéndose interior y transversalmente ; esporanjios hipófilos y sen- tados ; esporos oblongos ó arriñonados; indusio nulo ó falso saliendo de la márjen de la fronda y arrollado hacia fuera; tallo rastrero con frondas estipitadas, pinadas, dicótomas con las pínulas frecuen- temente pinatífidas : gleicheniáceas, F. 5. — Anillo completo estre- cho ó recojido, terminal, abriéndose esterior y lonjitudin^-lmente ; esporanjios hipófilos sésiles, con esporos piramidales ó cónicos, pro vistos de esporodermos crestados ó erizados ; indusios variados ; á veces volubles, de frondas variadas cuyas fértiles son contraidas : esquizáceas, F. 5, 80. 80. Indusio nulo, 81 . — Indusio escamiforme acogollado, pegado transversalmente de las venas y tapando cada uno de los esporan- jios dispuestos en dos series alternadamente sobre las lacinias mar- jinales de las frondas y abriéndose lonjitudinalmente. Tallo voluble, escandente ó trepador con frondas conyugadas, palmeadas, lobadas ó pinadas : li/godiuni. 81. Esporanjios sésiles y dispuestos en dos series sobre las laci- nias laterales y mellizas de las frondas y reeojidas en raquis multi- plicado apanojado y no marjinado ; desnudos y abriéndose esterior y lonjitudinalmente. Yerbecitas de rizoma ascendente ó rastrero con frondas estipitadas, cuyas estériles son temadas, pinadas, bipinatí- fidas ó descompuestas, mientras las fértiles son ternado-pinadas ó sobre-descompuestas : aneimia. — Esporanjios situados sobre las la- cinias lineares y provistas de una membrana marjinal, opuestos en VEJETALE3 FANERÓGAMOS MONOICOS. 175 el ápice de las frondas en donde están dispuestos á manera de los dientes de un peine, dijitadog ó dispuestos en dos ó en 4 series, sos- tenidos por pelos, abriéndose esterior y lonjitudinalmente. Rizoma cerdoso con frondas simples estipiformes dicótomo-partidas ó con forma de abanico : scMznea. 82. Esporos elipsoídeos ; indusio nulo, .superficial ó concreto, con los esporanjios bipófilos, sésiles, distintos ó reunidos entre sí y abiertos sea por el vértice, sea por el lado ; frondas simples, pinadas ó 3 veces pinadas, con las hojuelas siempre elongado-lanceoiadas y enteras, F. 5, T..YIII, 83. — Esporos farináceos; esporanjios senta- dos uniloculares ó provistos de un tabique transversal é incompleto que les hace casi biloculares, coriáceos, sin vasitos, distintos ó co- natos entre sí, semi-bivalves. Frondas saliendo mellizas de un rizo- ma, derechas al nacer, la una estendida y la otra recojida en raquis y fructífera, F. 5, T. IX. — Esporanjios trabados y dispuestos en es- pigas dísticas y articuladas, uniloculares y abriéndole transversal- mente ; yerbecitas de fronda estéril foliácea y anchamente oval, de cuya vajina sale la fértil : opMoglossum. 83. Induííios superficiales ciñendo los soros lineares formados por esporanjios trabados, dispuestos en dos series aplicadas á las venas transversales y abriéndose por medio de un poro. Tallo dere- cho ó erguido con fronda simplemente pinada de divisiones enteras : danciea. — Indusios coriáceos trabados con los soros y lonjitudinal- mente bivalves; esporanjios dispuestos en dos series, aplicados al ápice de las venas transversales, conatos entre sí y formando soros oblongos que se abren transversalmente por medio de una grieta vertical ; frondas estipitadas, bipinadas ó tres veces pinadas : ma- ratHa, F. 5, T. YII. VE JET ALES UNISEXUALES 84. Monoicos ó dioicos, 86. — Polígamos ó seudo-polígamos, 85. 85. Polígamos lejítimos ó provistos de flores hermairoditas y uni- sexuales, tan pronto sobreseí mismo individuo como sobre dos suje- tos distintos, pero siempre de la misma especie, 251. — Seudo-polí- gamos, es decir monoicos y dioicos á la par. 86. Vejetales monoicos, 87. — Vejetales dioicos, 200. 87. Arboles, arbustos ó matas, 88. — Yerbas ó plantas herbáceas de ordinario, 153. 88. Cuyo tallo es un astil ó estipe, 89. — Con tronco ó tallo lejí- timo, 103. 89. Monoicos lejítimos, 93. — Andrójinos ó monoicos, con flores teniendo ambos órganos sexuales, pero que necesitan del concurso de otra flor mas perfecta para salir fecundada, 90. 90. Todos los espádices ó támaras andrójinos, cuyas flores supe- riores son masculinas, mientras las inferiores son femeninas ; espá- dices sentados en un eje escamoso ; espata monófila, mucronada y asurcada por el dorso, 91. — De los espádices ó támaras que sobre el mismo árbol se hallan los unos son andrójinos, mientras los otros son 176 MÉTODO DICOTÓMICO. masculinos, con las flores densamente dispuestas en los brazos ; es- pata monófila, leñosa, espesa en forma de curiara ó de canoa, asur- cada, persistente y cuyo ápice se prolonga en pico largo, 92. 91. Grandes y primorosas palmeras de frondas muy largas pina- das ó pinatífldas , de estipe desnudo y á veces muy alto ; flores fe- meninas con un periantio único partido en 9 divisiones en 2 series, cuyas 3 esteriores parecen un cáliz á algunos autores, mientras las 6 interiores según ellos representan la corola ; ovario único trilocu- lar, pero unilocular y con un solo óvulo por causa de aborto, ovoi- deo, sentado j algo hueco ; las flores masculinas, al contrario, cons- tan de un periantio con 6 divisiones dispuestas también en 2 series, conteniendo 6 estambres y aveces los rudimentos del ovario. Fruto drupáceo muy grueso, cuya base acompaña el periantio persistente y algo crecido : coccos, F. 14, T. IV. 92. Palmera que se eleva hasta 10 y 15 varas de altura, de esti- pe sin espinas, pero que se queda durante mucho tiempo con la base de las frondas que no se desprende sino después de podrida, lo que le da un aspecto particular ; sus frondas no son muchas, algo dis- tantes, derechas, muy grandes y largas de 3 á 5 varas y hasta mas, pinadas ; támaras muy grandes, muy furnidas de flores, axilares y con eje grueso y fuerte, del cual salen una multitud de brazos lar- gos como de 6 á 1", horizontales, que cargan con flores sentadas cuyas femeninas ocupan la parte inferior; de periantio con 6 divi- siones en 2 series ; en las flores masculinas las 3 divisiones esterio- res del periantio son membranosas y óvalo-triangulares, mientras las 3 interiores son lanceoladas y sub-coriáceas, y contienen 6 es- tambres, con anteras lineares y pegadas al dorso; en las femeninas, al contrario, las divisiones periantiales son membranosas, poco lar- gas y todas semejantes, acrescentes y persistentes, ovario ceñido por una cupulita membranosa, óvalo-cónica, de cuyo ápice sale un estilo corto cilindrico, terminado por 3 estigmas arrollados y abiertos; drupa oval del tamaño como de un huevo grueso de pa- loma, con epicarpio cartilajinoso, cubriendo un mesocarpio muci- lajinoso ácido y fibrosito ; hueso durísimo fusiforme; endospermo duro, oleajinoso, con el embrión lateral : maximiliana, F. 14, T. IV. 93. Espádices con una, dos ó mayor número de espatas, 94. — Espádices sin espata alguna; estipe no muy alto, vestido de fibras dispuestas como en redecilla; frondas bastante grandes, inermes, pinadas, con las divisiones dobladas y cuya base del raquis está á veces provista de fibras negras muy fuertes y pareciendo crin ; es- pádices densos color de orin y apanojados, con las flores sentadas adentro de los alveolos de sus brazos, provistos de brácteas y de bracteitas ; serie esterior del periantio formada de 3 piezas ovales é imbricadas, las de la interior son también ovales v á su base están insertos 6 estambres inclusos, de filamentos planos y reunidos por la base, de anteras ovales y erguidas, con el rudimento del ovario en el centro de las fiores ; en las flores femeninas las divisiones de la serie esterior periantial son anchamente ovales , con las de la in- terior iguales; ovario turbinado sub-trígono, con estigma sentado, VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 1'77 cortísimo v abierto; bava clriipiforme, comprimido-globosa, de color amarillento-verdoso, monosperma, de endospermo igual y córneo, con el embrión lateral j situado cerca de la base : leopoldina, F. 14, T. V. 94. Espatas dos ó una sola, 95. — Espatas muchas : primorosísi- mos árboles de estipe alto, sostenido ordinariamente por un cono de raices sobresaliente en el suelo, inerme, anuloso, frecuentemente mas crecido por la parte media; frondas elegantemente pinadas, cilíndrico-convolutas por la base de los raquises, con divisiones ú hojuelas deltoídeas anteriormente dentadas ó como roedas; espatas pronto deciduas saliendo por debajo de las frondas, envolviendo es- pádices ramoso-tomentosos, de flores densas, amarillentas, acompa- ñadas de brácteas j de bracteitas poco desarrolladas ; periantio de las masculinas, de serie esterior 3-fila, cuvas divisiones son cónca- vas y ovales, mientras la serie interior, de 3 piezas también, las tiene ovales y erguidas; estambres 12-24 con filamentos cortísimos y cilindricos, cuyas anteras tetrágonas acompañan á los rudimentos del ovario. El periantio de las femeninas difiere por ser orbiculares é imbricado-convolutas las divisiones de la serie esterior, mientras las de la interior son conformes con las masculinas ; ovario trilocu- lar y unilocular por causa de aborto, cuyo ápice lleva tres estigmas sentados. Baya monosperma, de color aleonado-verdoso, de meso- carpio poco fibroso y jelatinoso; hueso durísimo moradusco amari- llento ; endospermo igual un poco huesoso, embrión basilar : iriar- tea, F. 14, T. V. 95. Dos espatas, 96. — Una espata única : estipe alto de 15 á 20 varas y hasta mas, con aguijones fuertes, frecuentemente ventrudo por la parte media, coronado por frondas grandes, pinadas, sub-eri- zadas ; espádices axilares simples y persistentes, con las flores mas- culinas situadas en la parte superior de los brazos y sentadas en los alveolos, mientras las femeninas ocupan la parte inferior que es co- mo reticulada ; periantio de las flores masculinas cuyas 3 divisiones esteriores y pequeñas son ovales, mientras las 3 interiores prismá- tico-cilíndricas por la base son lanceolado-oblongas ; 6 estambres inclusos, de filamentos comprimidos con anteras lineares, sub-asae- tadas, acompañando al rudimento del ovario que ocupa el centro de la flor, mientras el de las femeninas tiene sus divisiones esteriores redondeadas y las interiores ovales y de estivacion imbricada ; ova- rio 3-locular pelierizado, envuelto en una especie de cúpula anular 6-dentada : estilo corto con 3 estigmas lanceolados y vueltos hacia fuera. Drupa redonda de epicarpio mucilajinoso fibroso, algo co- mestible ; hueso espeso lenticular, con 3 poros laterales; endosper- mo oleajinoso muy duro ; embrión ocupando uno de los ojos latera- les : acrocomia, F. 14, T. IV. 96. Las dos espatas completas ó incompletas, pero nunca partién- dose en fibras lonjitudinales que las hace parecer muchas, 97. — Las dos espatas completas, pero por fin partiéndose en fibras lonjitudi- nales, cuya esterior, comprimida y de márjen como con dos filos apenas pronunciados, está abierta por el ápice. Estipe de altura me- diana, grueso, derecho ó inclinado, con escamas ó cicatrices; fron- TOMO I 12 nS MÉTODO DICOTÓMICO. das bastante grandes, pinadas, casi derechas, cuyos raquises son espinoso-aserrados por la márjen; espádices densamente corimboso- ramosos y tomentosos, con alveolos conteniendo las llores cuyas masculinas son densamente imbricadas y las femeninas esparcidas ; periantio de las primeras cuyas 3 divisiones esteriores papiráceas son lineares ó lanceoladas, mientras las 3 interiores membranosas, lanceoladas v conniventes, contienen 6 estambres inclusos, de fila- mentos formando una especie de odrecita de vértice 6-fido, con an- teras ovales ú oblongas y abiertas, conteniendo en el centro un ovario rudimentario. Las tres divisiones del periantio de las feme- ninas son membranosas, ovales é imbricado-convolutas, las interio- res, en número de 3 ó de 6, son ovales ú oblongas é imbricado-con-- volutas ; ovario oval ó sub- cilindrico 3-locular , con dos celdas abortadas ; estigmas 3 como ganchosos y abiertos ; drupa angulosa y oval, monosperma, cuyo sarcocarpio fibroso es á la vez como fon- goso y oleajinoso ; endospermo córneo, con el embrión lateral y si- tuado cerca del ápice : elais, F. 14, T. IV. 97. Las dos espatas completas, cuya esterior no se revienta por la barriga; frondas provistas de una vaina coriácea cilindrica y muy larga, 98. — Espata esterior solamente completa, mientras la in- terior, de ápice abierto, se revienta por la barriga; frondas de base apenas envainadora, lOL 98. Flores masculinas y femeninas entremezcladas sobre el ápi- ce; las primeras mas abundantes en la parte superior de los brazos, mientras las segundas lo son por la base de ellos; endospermo nun- ca ruminado y las divisiones calizinales nunca aquilladas, 99. — Igual disposición de las flores, periantio de estivacion valvar en las masculinas 3' arrollada en las femeninas; endospermo siempre ru- minado, 100. 99. Estipe de tamaño regular bastante alto, anuloso é inerme ; frondas pinadas con divisiones pectinadas, desiguales y bífidas por el ápice; espata interior sub-leñosa, envolviendo el espádice entero, y por fin abriéndose por el vértice; flores sentadas, bracteadas y bi- bracteoladas; periantio de las masculinas G-filo, cuyas divisiones es- teriores, anchamente ovales, son imbricadas y por fin reunidas, mientras las interiores son libres, oblongo-lanceoladas y de estiva- cion valvar, conteniendo por su fondo 6, 9, 12 estambres de fila- mentos subulados, con anteras lineares dorsífijas y por el centro un ovario rudimentario. El de las femeninas es conforme y contiene una especie de corona 6-dentada formada por los estambres rudi- mentarios, en el centro de la cual está el ovario trilocular, termi- nado por tres estigmas sentados y conniventes. Drupa pequeña oval, bacciforme, de sarcocarpio fibroso; hueso de testa coriácea y del- gada; endospermo córneo é igual con el embrión basilar : oreodoxa, F. 14, T. V. 100. Estipe fuerte, delgado, derecho, alto, anillado ó liso, iner- me ó á veces aguijonóse, con frondas pinadas, de divisiones pec- tinadas, abiertas, lanceoladas y aguzadas, cu^^o raquis está á veces provisto de aguijones; espatas membranosas ó fibroso -coriáceas; flores sentadas en los alveolos de los brazos de los espádices y brac- VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 179 teoladas; periantio de las flores masculinas 6-partido, cuyas tres lacinias esteriores son aquilladas r las 3 interiores sueltas, son lan- ceoladas y de estivacion valvar, conteniendo en su fondo 3, 6, 12 estambres, de filamentos subulados y reunidos por la base con ante- ras ovales y asaetadas, en cuyo centro está el rudimento del ovario; en las femeninas el periantio es conforme, pero la estivacion de la serie interior es arrollado-imbricada, con el rudimento de los es- tambres y en el centro el ovario oval trilocular, de cuyo ápice salen 3 estigmas sentados y abiertos. Drupa bacciforme, monosperma, de sarcocarpio fibroso; hueso de testa delgada, crustácea y membrano- sa; endospermo ruminado, con el embrión basilar ó lateral cerca de la base : areca, F. 14, T. V . 101. Espata esterior mas corta, abierta por el ápice y membra- nosa, interior fusiforme, coriácea ó sub-leñosa; estambres 6, 9, 12 saliendo de un disco basilar, 102. — Espata esterior corta, cilin- drica y de ápice bífido, interior leñosita y fusiforme; estambres 6, dispuestos por pares opuestos á las divisiones interiores del perian- tio ; primorosos árboles de estipe largo de 10 á 15 varas y hasta mucho mas, delgado, derecho, con zonas circulares y provisto de aguijones dispuestos á manera de espiral; frondas bastante grandes, aproximadas en el vértice, de raquis aguijonoso, pestañoso por la base, pinadas y con hojuelas lineares. Espádices bastante grandes, axilares, simples, cuyos brazos alveolado-tomentosos cargan con flo- res sentadas y bracteoladas, de periantio con la serie esterior en am- bos sexos monófila; en las masculinas es sub-globosa y sus 3 lóbulos profundos son orbiculares ú obovales; en las fem.eninas es al contra- rio sub-campanuda ó turbinada y de boca troncada: la serie interior en las masculinas es algo plana, con tres ángulos algo membranosos y sub-agudos, conteniendo los estambres cuyos filamentos subulados llevan anteras lineares, oblongas y acostadas, con el rudimento del ovario en el centro ; en las femeninas es aniliforme , membranosa y 3-dentada; ovario de base al principio triangular y después sub- globosa, con 2 celdas rudimentarias abortadas, de cuyo ápice salen 3 estigmas sentados. Drupa oval, color amarillo anaranjado, de ta- maño ordinariamente de un huevo de paloma, con el sarcocarpio fi- brosito, carnoso y algo oleajinoso; hueso duro con 3 poros por el vértice, conteniendo un endospermo cartilajincso : guilelmia, F. 14, T. IV. 102. Palmeras ordinariamente pequeñas, cuyo estipe mas ó me- nos largo tiene solamente \"-^' de diámetro y es muy agaijonoso ; frondas pinado-pectinadas, pocas, terminales ó esparcidas á lo largo del estipe por trechos inermes; espádices terminales ó laterales y á veces axilares, simples ó formados de brazos simples, cuya ])arte inferior está ocupada especialmente por las flores femeninas, mien- tras las masculinas, mucho mas numerosas, están esparcidas y hasta entremezcladas con ellas, sentadas y bracteadas todas; periantio de las masculinas 5-partido ó trífido, con las divisiones esteriores sub- lanceoladas; las interiores, .al contrario algo planas, son estriaditas, de base frecuentemente reunida, con los filamentos subulados que cargan anteras sub-asaetadas, mientras el de las femeninas es ur- 180 MÉTODO DICOTÓMICO. ceolado Ó aniliforme; ovario oval ó prismático-trígono, con un es- tigma y formando al principio una especie de pirámide en el fondo y centi'O de la ñor. Drupa de epicarpio crustáceo, con el mesocar- pio mucilajinoso-ácido y pulposo; hueso muy duro : hactris, F. 14, T. IV. 103. Vejetales resinosos siempre verdes, cuyo fruto es un cono, 104. — Yojetales resinosos no siempre verdes y cuyo fruto no es nunca ni un gálbulo ni un estróbilo tampoco, 10*7. 104. Gálbulo ó sícono cuyas escamas carnositas se han soldado entre sí para formar una especie de drupa escamosa por la base, om- bligada por el ápice, con 1 ó 3 semillas erguidas y de testa huesosa; árboles pequeños ó arbustos á veces dioicos, con hojas linear-lan- ceoladas, tiesas, las mas veces diminutas y escamiformes; flores masculinas en amentos axilares ó sub-terminales, globosos y peque- ños; estambres algunos, desnudos, insertos en un eje, de filamentos escéntricamente abroquelados y empizarrados, celdillas de las ante- ras 3, 6, abriéndose lonjitudinalmente, reunidas' interiormente por la márjen ; amentos femeninos ovales, con brácteas imbricadas por la base, involucro formado de 3, 6 escamas reunidas por la base, y conteniendo 1 ó 3 óvulos : juniperus, F. 34. — Estróbilo ó cono le- jítimo formado de escamas leñosas ó coriáceas, de vértice incrasado, areoladas ó mas veces aguzadas, persistentes y libres; 1, 2, 3 semi- llas alojadas en una escavacion que se halla en la base de las esca- mas, inversas y bastantes veces provistas de una especie de ala; árboles de ordinario altos y corpulentos, 105. 105. Hojas lineares, amanojadas ó fasciculadas, cuyos hacecillos están envueltos separadamente por la base con una vaina membra- nosa; anteras l)iloculares abriéndose lonjitudinalmente, 106. — Ho- jas también lineares, de ordinario menos largas, no fasciculadas, pero sí siempre solitarias, esparcidas ó dísticas; celdillas de las an- teras abriéndose transversalmente ; amentos masculinos axilares, agrupados hacia el ápice de las ramitas ; amentos femeninos latera- les y esparcidos; brácteas persistentes; escamas aguzadas por el ápi- ce; estróbilo oblongo formado de escamas sub-leñosas, lisas, de base no hueca, con las semillas libres del eje y siempre aladas: aMes, F. 33. lOG. Amentos masculinos numerosos, dispuestos en espigas ter- minales; amentos femeninos 2, 3 solitarios y terminales; brácteas fugaces; escamas superiormente y por debajo del ápice arrejonadas ó mucronadas, deciduas; estróbilo cónico formado de escamas leño- sitas, de ápice engrosado y angulosas, huecas por la base, por fin desparramadas y persistentes ; testa de las semillas leñosa ; ala de- cidua : pinus, F. 33. 107. De savia lechosa, 108. — De savia nunca lechosa, 137. 108. Arboles mas ó menos grandes, 109. — Arbustos, matas ó plantas herbáceas, 129. 109. Flores mas ó menos desnudas y por consiguiente incomple- tas, siempre insertas sobre un receptáculo de forma y tamaño muy variados, 110. — Flores nunca desnudas ni tampoco colocadas so- bre un receptáculo, 116. VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 181 110. De inflorescencia andrójina, flores colocadas en la parte in- terior hueca de un receptáculo ó involucro que se vuelve carnudo j simula un fruto, con escamitas situadas en la boca que se halla en su ápice, 111. — De inflorescencia monoica ó raras veces ala par dioica por causa de aborto ; flores situadas por toda la superñcie esterior de un receptáculo mas ó menos cilindrico, nunca hueco j mas ó me- nos carnudo. 112. 111. Arboles á veces muj corpulentos, muy altos, muy ramosos, cuyas ramitas se terminan siempre por una yema mas ó menos có- nica, puntiaguda y siempre envuelta en una especie de espata mem- branosa; de hojas simples, ordinariamente alternas, y rarísimas veces opuestas, mas ó menos pecioladas, enteras mas ó menos loba- das,, coriáceas, lisas y lustrosas ó ásperas y opacas. Las flores mas- culinas situadas algo por debajo de las escamas que tapan la boca del involucro, á la parte superior é interna, del cual se las halla formadas de un periantio de 2, 6 divisiones desiguales y contenien- do 1, 2, 3 y hasta 6 estambres salientes ; las femeninas al contrario están colocadas sobre toda la parte interna del involucro y constan de un periantio 5-partido y membranoso, que se aplica á un carpelo simple que contiene un óvulo colgante y terminado por un estilo la- teral que lleva dos estigmas filiformes. El involucro, llegada la sa- zón de la madurez, es un higo y contiene en su interior muchos aquenios muy pequeños, lenticulares, que contienen un embrión en- corvado alojado en un endospermo carnudo : ficus, F. 41, G. III. 112. Flores siempre monoicas, sentadas sobre un receptáculo mas ó menos largo ó globoso, nunca desnudas y cuyas masculinas son dispuestas en amento y las femeninas en cabeza globosa, 113. — Flores monoicas ó dioicas por causa de aborto, siempre desnudas, sentadas sobre un receptáculo globoso que se vuelve abayado, axilar y pedunculado y separadas las unas de las otras por una bráctea abroquelada, 114. 113. Arboles muy grandes, corpulentos, ramosos, de hojas mas ó menos grandes, enteras ó lobado-sinuadas, pecioladas, alternas, aproximadas al vértice de las ramitas especialmente, las cuales se terminan por una yema puntiaguda algo corva, cónica y envuelta en una membrana espatiforme y caduca. Amentos masculinos casi cilindricos, bastante gruesos y largos de 5"-6", con muchísimas flo- res sentadas y de periantio con 2 valvas, conteniendo un estambre único; los femeninos al contrario, mas ó menos esféricos, son for- mados de muchas flores* desnudas, con un solo pistilo compuesto de un ovario ovoideo, unilocular, de cuyo ápice t^ale un estilo filiforme simple 2, 3-partido y que se termina por un estigma único y simple por cada brazo. Tales ovarios, soldándose con el receptáculo en que están pegados, constituyen una fruta muy gruesa que contiene pe- pitas envueltas en una carne abundante, las cuales abortan en una especie, de manera que la fruta es una masa enorme de pulpa co- mestible : artücar])iis, F. 39, T. 1, G. I. 114. Arboles grandes y corpulentos, á veces muy altos, coposos, de hojas simples alternas, coriáceas, pecioladas, estipuladas, oblon- go-lanceoladas, enteras ó á veces aserraditas, alampiñadas ó pubes- 182 íaÉTODO DICOTÓMICO. ceníes; pedúnculos solitarios ó mellizos, nunca ramosos; estambres solitarios saliendo de entre las escamas del receptáculo, cuyos fila- mentos cortos se terminan por anteras orbiculares, abroqueladas, bilameladas y abriéndose por toda la circunferencia; involucro de las flores femeninas bifloro, urceolado y provisto de escamitas abro- queladas ó de cerdas; ovarios uniloculares reunidos entre sí y á la par con el involucro; estilo terminal bífido, cuyos brazos filiformes se terminan en estigma plumoso ó lobulado. Fruto abayado, apenas carnosito, erizado ó mucronadito, con una semilla única sub-globo- sa: galactodendron, Irosymum, F. 39, T. III, G. III. 1Í6. Arboles algo lechosos solamente; flores femeninas y mascu- linas amentáceas y cuyo fruto es un sorosis, 136. — Arboles muy lechosos, de flores amentáceas ó no, pero cuyo fruto no es nunca un sorosis, 117. 117. Hojas siempre simples y con glándulas peciolares, 118. ~- Hojas siempre compuestas, con ó sin glándulas peciolares, 127. • 118. Flores en espigas amentiformes masculinas, llevando por la base algunas flores femeninas solitarias saliendo de la base de una bráctea biglandulosa mayor que las que acompañan á las flores mas- culinas, pero conforme, ó en amentos lejítimos con una sola flor fe- menina hacia la base ó axilar sin bráctea glanduiosa, 122. — Flores siempre apanojadas, 119. 119. Cuyas femeninas están dispuestas en panojitas parciales in- feriores, raras y con un pedúnculo grueso, mientras las masculinas superiores son acompañados de muchas brácteas, con. pelo estrella- do, diminutísimo y farináceo-blanquecino; están también en pano- jitas, cu3'o conjunto con las primeras forma panojas grandes com- puestas: hay dos glándulas situadas por el vértice del peciolo, 120. — Una sola flor femenina terminal, las masculinas inferiores pro- vistas de bracteitas, formando panojitas parciales cortas, acompa- ñadas de una estípula ó bráctea larguísima estipitado-glandulosa, cuyo conjunto forma una panoja grande común y terminal: hay dos glándulas situadas por la base del peciolo, 121. 120. Arboles de mediana altura y tamaño, de hojas alternas, lar- gamente pecioladas, lobuladas, alampiñadas y cuyo lóbulo mediano mayor es deltoídeo, á veces aovadas y enteras ; flores con cáliz tubu- lar 2, 3-fido, de lacinias con estivacion valvar; corola con 5 pétalos un poco mas largos que el cáliz, de estivacion torcida en espiral so- bre sí mismo, las cuales alternan con 5 escamas ó glándulas; las masculinas tienen muchos estambres de filamentos cortos, mona- delfos, saliendo de un disco, con anteras adheridas é introrsas; en las femeninas hay un ovario envuelto en una especie de túnica dis- tinta, velluda y abierta por el ápice, 2, 3-locular, cada celdilla mo- nosperma; 2, 3 estilos bipartidos, cuyas lacinias son aguzadas. Fru- to carnoso, abriéndose por el vértice, con 2 ó 3 cajillas cartáceas, interiormente abiertas por debaio del ápice, bivalvos y monosper- mas, aleiivites, F. 106, T. III, S.-T. II, G. III. 121. Arboles bajitos ó arbustos sarmentosos, con hojas alternas, bi estipuladas, pecioladas, entejérrimas, espesitas, con las nerva- duras pronunciadas y dispuestas en redecilla por la cara inferior ; YEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS: 183 cáliz 4-partido, conteniendo en el fondo un disco gland aloso color de sangre, de cuyo centro sale una columnita morada con 2, 3 lóbu- los, cargando cada uno con su correspondiente antera de celdillas distintas casi alojadas en el lado correspondiente del lóbulo; las flo- res femeninas constan de un periantio conforme, conteniendo un ovario obtuso trígono, con 3 celdillas uniovuladas, de cuyo ápice sale un estilo corto, espesito, con estigma trilobulado; fruto como drupáceo, formado interiormente de 3 cajillas monospermas, tri- partible por fin; semillas sub-globosas, de concha bastante sólida, rugosa, negruzca y persistente : omplicUea, F. i06, T. III, S.-T. V, G. III. 122. Fruto drupáceo, pareciendo una manzanita, cuyas semillas ovoideas tienen el tegumento persistente, leñoso y rugoso; estam- bres 2, 4 monodelfos, de filamentos con 2 anteras adheridas y es- trorsas, 123. — Fruto nunca drupáceo, 124. 123. Arboles bajitos, coposos, criándose en las orillas del mar, de hojas simples, alternas, pecioladas, ovales, aserradas ó festonea- das, puntiagudas, coriáceas, de cara superior lustrosa, lampiñas, como algo apiñadas por el vértice de las ramas, que conservan lar- go tiempo la cicatriz de la inserción del peciolo, acompañado de dos estípulas, y cuya base lleva por su cara inferior unas glándulas pe- queñas, discoidea, de color rojo oscuro. Amentos terminales forma- dos de unos 20 grupos de flores masculinas situadas en la axila de una bráctea bastante grande, cóncava, con los bordes ondulosos, acompañada por la base de 2 glándulas semejantes á las del peciolo, secretando un licor que chupan los insectos, y especialmente las hor- migas; tales grupos son alternos ó esparcidos sobre un eje cilindrico y algo carnudo, largo de como 2"-3"; las flores masculinas constan de un periantio campanudo, emarjinado, escamoso, algo bífido, de cuyo centro sale una columnita que lleva los estambres; las flores femeninas al contrario, solitarias y en número de 3, 5, y situadas por la l>ase del amento, cuya parte masculina se desprende y se cae después de verificada la fecundación, constan de un periantio trífido ó 3 dentado, de divisiones algo escamosas y glandulosas; ovario pi- riforme con 5, 7 celdillas y de cuyo ápice salen 4, 8 estilos largos y doblados hacia fuera : Myyomane, F. 106, T. III, S.-T. V, G. III. 124. Especie de cápsula formada de 3 carpelos ó 3 cajillas abriéndose cada uno por 2 ventallas y sin elasticidad, 125. — Cáp- sula leñosa ó elaterio, deprimida, orbicular, lobulada y formada de 12, 8 cajillas pegadas de una columna central y entre sí por los la- dos, abriéndose con elasticidad, bivalves y monospermas, 126. 125. Arboles bastante corpulentos y coposos que se elevan de 20' á 50', con hojas alternas, simples, pecioladas, lisas, ordinariamente glandulíferas, mas ó menos coriáceas, lanceolado-oblongas, oblon- gas, elípticas, ob-aovadas ó redondeadas, sub-enteras, dentadito- glandulosas, repando-cnteras ó algo festoneadas, con ó sin puntitos transparentes ; estípulas caducas y de forma variada; flores en ra- cimos espiciformes ó amentáceos, terminales ó laterales, glandulí- feros, cuyos primeros son masculinos, los otros andrójinos, mien- tras las flores femeninas ocupan la base; flores masculinas en grupos 184 MÉTODO DICOTÓMTCO. de á 3 Ó mas en la axila de una bráctea, con 2 glándulas por la base semejantes á las que se hallan por debajo del ápice del peciolo ; cá- liz bífido ó 3, 4-dentado con 2, 3 estambres monadelfos por la base, esertos, de anteras globosas j estrorsas ; las femeninas, solitarias, constan de un periantio 3-fido ó 4-dentado, con un ovario globoso, 3-locular, de cuyo ápice sale un estilo 3, 2-fido, cuyos brazos sim- ples se doblan hacia fuera y se terminan en estigma algo dilatado. Cápsula cuyas cajillas contienen una sola semilla sub-globosa, sin carúnculai v de tegumento esterior persistente y áspero : sapium, F. 106, 'f ÍI1,S.-T. V. 126. Árboles altos, corpulentos, muy ramosos y coposos, de tron- co armado de aguijones; hojas acorazonadas por la base, redondea- das, acuminado-puntadas por el vértice, sub-entcras ó algo aserra- ditas, lisas, lustrosas, coriáceas, anchas de 4-5 lf2, 2"-3" y largas de 6-5-3-4, cuyo peciolo frecuentemente mas largo que ellas carga con 2 glándulas situadas por encimja de la base ó hacia el vértice, y con la inserción acompañada de 2 estípulas anchas, ovales, foliá- ceas y caducas. Flores masculinas en amentos o espigas ovales ú oblongos, largamente pedunculados, largos de como 2", bastante gruesos, cubiertos de una epidermis muy fina que al reventarse du- rante la florescencia nos ha parecido forman el periantio de cada flor, ias cuales son muchas y densamente imbricadas, terminales, de periantio cupuliforme, desigualmente dentado, envolviendo la base de un andróforo ó columna central claviforme que carga con 20 o 25 estambres sentados, cuyas anteras están pegadas en la parte este- rior y algo inferior, de tuberculitos dispuestos en espiral, estrorsas, cuyas 2 celdillas están un poco separadas la una de la otra; cada andróforo constituye pues una ñor masculina que va floreciendo su- cesivamente desde la base del amento hacia el véitice. Las flores femeninas al contrario son solitarias, axilares y mas ó menos distan- tes de las masculinas, erguidas, con pedúnculo simple y largo de 6 á 8'" y de periantio monófilo, cilindrico y asurcado, entero ó 3-par-^ tido, largo de 4 á b'" , conteniendo un ovario discoideo, deprimido, estriado, polilocular, uniovulada cada celdilla, de cuyo centro sale un estilo simple, largo de 1" 1|2, moradusco, infundibuliforme por el ápice, terminado á manera de la boca de una trompa, con 12 á 16 lobalitos, y con tantos bracitos pendientes, ancho de 10 á 14'". Se- millas comprimidas, discoideas, cuya testa leñosa y bruna es lisa y lustrosa : hura, F. 106, T. 111, S.-T. V, G. IV. 127. Hojas con 5 hojuelas, de peciolo biglanduloso por el vértice; flores terminales en panojas, cuyas masculinas pedunculadas y bi- bracteadas son glandulosas, mientras las femeninas son subsesiles; tienen una corola, 128. — Hojas de 3 en rama, reunidas hacia el vértice de las ramitas; peciolo sin glándulas; flores axilares ó ter- minales en panoja arracimada, con una sola flor femenina terminal en cada racimo; corola nula. Árbol muy alto, corpulento y coposo, con hojas largamente pecioladas y dijitadas, cuyas hojuelas lanceo- lado-oblongas, enteras y lampiñas tienen la cara inferior blanque- cino-venosa. Flores masculinas con periantio campanudo 5-fido ó 5- dentado, de estivacion valvar; estambres monadelfos reunidos en VEJETALES FANERÓGAMOS MO?sOlCOS. 185 una especie de columna anterífera por debajo del ápice, cuyas 5, 10 anteras adheridas y estrorsas están dispuestas en 1 ó en 2 series ; las femeninas constan de un oYario colocado sobre la base del cáliz circular y persistente 6-lobulado, con 3 celdas uniovuladas, de cuyo ápice salen 3 estigmas sésiles j sub-bilobulados. Cápsula grande, fibroso-corticosa, formada de 3 cajillas que por causa de aborto se vuelven dos ó una, elásticamente bivalves y monospermas : lietea, Aubl.; sipJwnia, Rich., F. 106, T. III,S.-T. II, G. IV. 128. Árbol mediano, de hojas alternas, cuyas hojuelas entejérri- mas son nervosas y lustrosas ; cáliz campanudo, 5-dentado, pétalos mas largos que él, unguiculados, abiertos y de estivacion torcida en espira sobre sí mismo, alternando con 5 glándulas; en las flores masculinas hay 8 estambres monadelfos por la base, cuyos filamen- tos son distintos superiormente y filiformes, los 3 interiores mas largos y con anteras incumbentes; las femeninas de periantio con- forme, con un ovario de 2,3 celdas monospermas, de cuyo ápice sale un estilo corto, 2, 3-fido, cuyos estigmas son enteros ó dentaditos. Drupa ca;:'nosa, pulverulenta, con un hueso de 2, 3 ángulos, fenes- tradopor los ángulos y por debajo del ápice, con 2, 3 celdas monos- permas : anda, F. 106. 129. Inflorescencia andrójina involucrada; flores apétalas ó siem- pre desnudas, muchas masculinas y una sola femenina largamente pedunculada y eserta, contenidas todas en un involucro común mas ó menos caliciforme y mas ó menos colorido; vejetales siempre muy lechosos, 130. — Inflorescencia centrífuga andrójina; flores cimosas, pediceladas, nunca jamás desnudas, ni involucradas tampoco ; centro de la cima ocupado por una flor femenina; vejetales mas ó menos lechosos, 133. 130. Involucro rojo, bilabiado, con figura de chinela china ó de cabeza de pájaro, cuya división esterior mas corta y gibosa lleva in- teriormente y por la base 4 glándulas; abierto superiormente y provisto de lacinias dispuestas á manera de bóveda y tapando la abertura; hojas sin estípulas, 131. — Involucro caliciforme, mas ó menos campanudo y turbinado, de limbo 4, 5-fido, provisto este- riormente de 5, 1 glándulas, con inayor frecuencia discoideas, ama- rillentas ó blancas, estipitadas, espesitas y alternando con las laci- nias; hojas mas veces estipuladas, 132. 131. Matas fruticosas, con ramos carnosos, verdes, lustrosos, ci- lindricos y herbáceos, ba.stante blandos, mas ó menos largos, de base leñosa y color ceniciento, lampiñas, como de 3' á 6' de altura, con hojas espesas, simples, casi sentadas, bastante coriáceas, dísti- cas, lampiñas ó alampiñadas por ambas caras cuando tiernecitas, ondulosas por los bordes enteros, aovado-redondeaditas , elípticas ó espatulado-lanceoladas, de cara inferior dispuesta á manera de ca- noa, según la costilla, á veces aguzadas por ambos estremos, largas de 4-3 li2-2", con el peciolo muy corto, y anchas de 1 1{3-1 li2-l"; flores terminales cimosas, de las 4 glándulas amarillas 2 están si- tuadas por la base de la división superior, una de cada lado y las 2 Giras ocupan la base de cada división inferior; las flores masculinas consisten cada una en un pedúnculo sin brácteas, en cuyo ápico está 186 MÉTODO DICOTÓMICO. articulada una antera desnuda y saliendo por el pico del involucro, en donde se presenta con forma de un punto amarillo ó castaño, son desiguales, mas ó menos numerosos y se presentan sucesi- vamente, pegados todos en las paredes interiores del involucro, de cuyo centro sale la flor femenina largamente pedn neniada, con un periantio obsoleto ó apenas notable, ovario trilobulado, tri- locular, pendiente ú horizontal, de cuyo ápice sale un estilo único, terminado por 3 divisiones bífidas, cada una con su correspondiente estigma glanduloso, diverjente y puntiagudo. Fruto capsular for- mado de tres carpelos, pegados por el ángulo interno de un eje cen- tral, con una celdilla conteniendo una sola semilla provista de una carúncula, abriéndose por dos ventallas con elasticidad : pedilan- thus, F. 106, T. III, S.-T. I, G. II. 132. Arbustos, frútices, matas ó plantas herbáceas anuales, al- gunas raras veces muy carnosas, sin hojas ó con muy pocas y ar- madas de muchas espinas á primera vista pareciendo un cirio, pero casi siempre con hojas simples, enteras, mas ó menos pecioladas ó sentadas, de forma y tamaño muy variados, lampiñas ó pubescentes, á veces glaucas, con ó sin estípulas, cuyo peciolo está ó no articula- do con la vaina que termina la base, opuestas, verticiladas y á ve- ces alternas inferiormente ; flores en cabezuelas formando cimas umbeliformes, rarísimas veces polígamas por causa de aborto, axi- lares ó terminales; tales flores constan : las masculinas de un solo estambre, cuyo filamento es articulado por la parte mediana y acompañado bastantes veces de algunas cerdas situadas en rededor de su inserción, en número indefinido y variado ; están pegados en el fondo del involucro en rededor de la flor femenina que sale de su centro, con un ovario largamente pedunculado, saliendo fuera del involucro, ordinariamente un poco pendiente ú horizontal, trilo- bulado y formado de 3 cocos uniloculares monospermos, de cuyo ápice salen 3 estilos bífidos. Fruto capsular, cuyos carpelos pegados del eje central, se abren con elasticidad por dos valvas, tirando así una semilla provista ó no de carúncula : eupJiordia, F. 106, T. III, S.-T. I, Gr. I. 133. Cáliz 8-partido ó 5-lobulado, imbricado; corola torcida; es- tambres 10, 8, 15 monadelfos, de los cuales 3, 5 son mas largos; 5 glándulas situadas por la base del andróforo ; cápsula seca formada de 3 carpelos; estípulas persistentes; flores de ordinario coloradas, 134. — Cáliz colorido, 5-lobulado ó 5-partido é imbricado ; corola ninguna; 10 estambres distintos y libres, saliendo de un disco cen- tral, cuyos 5 esteriores son mas cortos; estilos multilobulados; cáp- sula abayada, estípulas caducas, 135. 134. Arbustos ó frútices mas ó menos ramosos, raras veces plan- tas herbáceas ó árboles bajitos, apenas lechosos, de hojas simples, mas ó menos pecioladas, alternas, mas ó menos lobuladas, partidas ó dijitadas, á veces enteras, de figura y tamaño muy variados; á veces las estípulas están reemplazadas por glándulas ramosas, ó son simples, glandulosas, multífidas ó setáceas, raras veces deciduas; flores amarillentas ó coloradas y dispuestas en cimas ó racimos axilares ó terminales, mas ó menos pedunculadas, pediceladas, sa- VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. • 187 lienclo de la axila de una bráctea, que suele faltar bastantes veces; anteras asaetadas; en las femeninas el ovario es oblongo-trilocular, mas ó menos trígono, mas ó menos liso, de cuyo ápice salen 2 ó 3 estilos cortos terminados por un estigma bífido mas ó menos vellu- do. Fruto capsular, trígono, trilocular, cuyos carpelos, pegados al eje central por su ángulo interno, son monospermos y se abren por dos valvas: ;íi/^í'oy¿íi, F. 106, T. III, S.-T. II, G. I. 135. Arbustos de raiz tuberculosa mas ó menos gruesa, de tallo como de 6' áS', ramoso superiormente, mas ó menos tuberculado, lampiño, de color ceniciento ó acbocolatado; hojas largamente pe- cioladas, alternas, simples, dijitadasó palmeadas, cuyas divisiones ó lóbulos, en número de 1, 5, raras veces 3, -son mas ó menos profun- dos, oblongo-lanceolados, aguzados y bien enteros, lampiños, de cara superior lustrosa, mientras la inferior es mas ó menos glauca, con el peciolo y las nervaduras moraduscas, verdes ó moraditas; estípulas caducas, pequeñas y lanceolado-aguzadas; flores amari- llentas, algo purpurinas ó blanquecinas, dispuestas en panojas pe- queñas ó racimos compuestos axilares ó terminales y paucíñoros, largos de 4"-6", á veces únicamente masculinos, otras veces forma- dos de flores de ambos sexos entremezcladas sin orden sobre los bra- zos, en fin algunas veces solamente femeninos; tales flores cuelgan de pedicelos bastante largos salieudo de la axila de una bracteita subulada; en las masculinas el fondo del cáliz 5~lobulado está ocu- pado por un disco de color anaranjado, carnudo, aniliforme y con 10 radios con que alternan los estambres, de filamentos filiformes, libres, mas cortos que el periantio, blancos y llevando anteras li- near-oblongas y amarillas; en las femeninas el periantio es 5-par- tido y contiene un ovario purpúreo, de base envuelta por un disco anaranjado, trígono y con 3 celdillas con un óvulo único; de su ápice sale un estilo corto con 3 estigmas doblados liácia fuera, asurcados y blancos, Fruto capsular abayadito formado de 3 carpelos monos- permos, colgante, ovoideo y con 6 alas estrechas; semillas elípticas, negras, lustrosas, con una carúncula blanca : mmii/iot, Pl., janiyJia, Kth., F. 106, T. III, S.-T. II, G. II. 136. Arboles no muy grandes y muy ramosos, de hojas simples, alternas, pecioladas, enteras ó aserraditas, ásperas y lampiñas ó pubescentes, cuyos peciolos están acompañados de dos estípulas mas ó menos oblongas y membranosas; amentos masculinos cilindricos, axilares, pedunculados, formados de muchas flores, de periantio mo- nófilo, con 4 divisiones estendidas v membranosas v de 4 estambres mas largos que él, acompañando al ovario rudimentario, mientras los femeninos son esféricos ú oblongos y compuestos de muchas flo- res con periantio de 4 sépalos que parecen escamas, y son imbrica- das, conteniendo un ovario lenticular, monospermo, que lleva en el ápice dos estigmas filiformes, sentados y glandulosos, óvulo-solita- rio y suspendido; los periantios de las llores femeninas volviéndose carnudos y soldándose entre sí constituyen la fruta, cuyas semillas colgantes tienen un embrión encorvado á manera de herradura, alojado en un endospermo espeso; radícula uirijida hacia el hilo : monis, F. 41, G. II. 188 -MÉTODO DICOTÓMICO. 137. Flores masculinas, amentáceas j desnudas, 138. — Flores amentáceas ó no, pero nunca jamás desnudas, 141. 138. Flores femeninas en espigas bracteadas; un solo estambre; drupa pequeñita; arbustos de hojas simples y aserradas, 139. — Amentos masculinos de flores bracteadas con 18, 24 estambres; flo- res femeninas solitarias; nuez de tamaño regular; hojas compues- tas, 140. 139. Arbustos mas ó menos ramosos, cujas hojas opuestas, sim- ples, mas ó menos aserradas, mas ó menos lanceoladas, son elípti- cas ó lineares, lampiñas, bastante grandes, de 5"-2" de largo sobre 18'" á 8'" de ancho, mas ó menos aguzadas, pecioladas é insertas por dentro de una vaina estipular. Flores masculinas en amentos á ve- ces como racimosos y sin brácteas : heclyosmiun, F. 36. 140. Arboles corpulentos, altos y frondosos, de hojas imparipi- nadas, con hojuelas articuladas, pecioladas y alternas; flores mas- culinas en amentos axilares, pedunculados, largos y cilindricos, formadas de una especie de periantio compuesto de escamas solda- das entre sí, de manera que parece con 6 divisiones; estambres con filamentos muy cortos, de anteras cuyas celdillas reunidas por un conectivo ancho se abren lonjitudinalmente ; las femeninas están agrupadas algunas hacia la sumidad de las ramitas y axilares, de periantio doble 8-partido, dispuesto en dos series, adherente con el ovario infero, unilocular, ovoideo, de cuyo ápice salen dos estigmas espesos, diverjentes y corvos hacia fuera. El fruto es una especie de drupa cuyo sarcocarpio, espeso y algo cornudo se abre espontánea- mente en dos ventallas irregulares y se desprende de la nuez, que contiene una sola semilla erguida y de cotiledones profundamente arrugados : juglmis, F. 42. 141. Drupa monosperma con 8 surcos, contenida en el tubo del periantio crecido y ventrudo, esponjosa esteriormente; flores ter- nadas contenidas en un involucro tetráfilo, cuyas dos laterales pedi- celadas son masculinas, mientras la del medio, sentada, es femeni- na, 142. — Fruto capsular formado de 3 carpelos ó cajillas pegadas de un eje central, bivalvares y monospermas, nunca jamás drupá- ceo, 143. 142. Árbol bajito y ramoso, de hojas simples alternas, aovadas, con una punta y redondeadas por la base, abroqueladas, casi tan largas como el peciolo, que lo es como de 6" : flores en cimas soste- nidas por un involucro de 4 hojuelas corimbosas, cuyas masculinas se componen de un periantio de 6 divisiones profundas dispuestas en 2 series, de manera que las 3 menores son internas y las 3 ma- yores esternas; 3 estambres monadelfos de filamentos biglandulo- sos por la base, cortos, derechos, con anteras abriéndose lateral- mente 1 las flores femeninas de periantio monófilo 8-partido, caduco, apretado por encima del ovario y caduco, contenido en un involu- cro cupuliforme, urceolado y acreciente ; 4 glándulas hay en el fon- do del cáliz, en cuyo centro está el ovario unilocular, con un óvulo único pendiente, de cuyo ápice sale un estilo incluso terminado por un estigma ancho é infundibuliforme. Drupa única movible en el in- terior del involucro avejigado, con una abertura por el áp^ce y an- VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 189 cho de 1 1\^" , amarillo y dos veces mas largo que ella; semilla con embrión sin endospermo, volcado y cuyos cotiledones grandes son lobulados : hernandia, F. 48. 143. Hojas grandes abroquelado-palmeadas, 7, 11-lobuladas, con peciolo largo y glandul itero; estambres muchos y poliadelfos ; cáp- sula erizada, 144. — Hojas ni grandes ni pequeñas, pero sí de ta- maño regular, nunca abroqueladas ni palmeadas; estambres en nú- mero definido y nunca poliadelfos ; cápsula lisa, 145. 144. Arbusto ó arbolito ramoso, pero no frondoso ni corpulento tampoco, que se eleva de 15' á 25' de altura, de corteza lampiña co- lor ceniciento ú rojizo, glauca ó rojiza en las partes herbáceas; de hojas alternas simples, estipuladas, cuyos lóbulos bastante largos y anchos son puntiagudos y aserradito-glandulosos, con peciolo largo de como 6" á 1" y acompañado por cada lado de su base y en su in- serción de una glándula, una ó dos otras están situadas como hacia la parte mediana de su cara superior aplanada, y también por su ápice hay dos glándulas ó una sola, pero melliza, y algo mas peque- ñas que las demás ; tales glándulas son discoideas, hemisféricas, algo cóncavas, de color rojo oscuro ó amarillento y secretan un lí- quido cristalino y sin color, inferiormente convexas y pegadas por el centro. Las hojas al salir de la especie de espata membranosa que las contiene y forma la estípula caduca cuya, cicatriz anular se ob- serva sobre las ramitas, son dobladas á manera de abanico, y sus dientes son representados entonces por glándulas amarillentas ó moraduscas, semi-trasparentes, algo ovoideas, las cuales terminan las nervaduras secundarias, y va disminuyéndose poco á poco su ta- maño á medida que va desarrollándose el limbo de la hoja y que se pronuncian mas los dientes de la circunferencia, y acaban casi por desaparecer : tienen mucha analojia con las otras. Flores en espigas ó racimos estra-axilares y piramidales, cuya mitad superior es fe- menina, mientras la base es masculina; los grupos de flores-, sea masculinas sea femeninas, salen de la axila de una bráctea bastante grande, cuya inserción está acompañada por cada lado de una glán- dula pequeña semejante á las peciolares; periantio conforme en am- bos sexos : es 3, 5-partido, sus divisiones son valvares y deciduas; en las masculinas los andróforos son muchos, desiguales y con mu- chos filamentos saliendo de su vértice, de anteras estrorsas, bilocu- lares é insertas por debajo del ápice del filamento; las dos celdillas son distintas; en las femeninas el ovario es trígono, trilocular, eri- zado ó liso, glauco ó rojizo, algo oval, de cuyo ápice sale un estilo muy corto 3-partido, cuyos estigmas bíüdos son peludos ó glandulo- sos, lineares y mas ó menos moraduscos. Fruto capsular erizado ó no, formado de 3 carpelos uniloculares, pegados por el ángulo inter- no de una columnita central, monospermos, abriéndose por 2 valvas, con semillas oblongas, ovales y algo achatadas, lustrosas, brunas y con manchas mas oscuras ó negras, provistas de una carúncula blanca : ricmus, F. 106, T. III, S.-T. IV, G. I. 145. Flores en corimbos largamente pedunculados, nunca jamás dioicas, con 10 estambres; savia abundante no enteramente lechosa, pero sí algo turbia, 146. — Flores nunca en corimbos, pero sí en 190 MÉTODO DICOTÓMICO. espigas amentáceas ó en racimitos, algunas veces dioicas; con 8, 10, 16 y hasta 20 estambres ; savia cristalina no muj abundante, pero bastantes veces balsámica, 14*7. 146. Arbustos muy ramosos, altos de 6'-12'-15', lampiños y de corteza como cenicienta en las partes leñosas, verde y lustrosa en las herbáceas, con hojas simples, alternas, pecioladas, aovado- oblongas ó angulosas, sub-panduriformes ó apenas 3, 5-lobuladas., abroqueladas por la base acorazonada, y mucronadas ó no por el vértice, reticulado-nervosas por la cara inferior, lampiñas, verdes y lustrosas cuando adultas y coriáceas, mientras que siendo tierneci- tas son algo moraduscas y alampiñadas; estípulas muy pronto deci- duas. Flores de cáliz 5-partido, corto, imbricado; corola monopétala dos ó tres veces mas Jarga que el cáliz 5-partido ó 5-lobulado , lam- piño ó velludo interiormente ; estambres monadelfos por la base y dispuestos de tal manera que 5 son esteriores y alternan con tantas glándulas conoideas que acompañan alabase del andróforo, de cuyo vértice salen filamentos filiformes con anteras estrorsas y bilocula- res ; ovario ovoideo, 3-locular, de celdas uniovuladas, de cuyo ápice salen 3 estilos»reunidos por la base, terminados por un estigma es- peso y bilobulado. Fruto capsular casi globoso, algo trígono, forma- do de 3 carpelos uniloculares y conteniendo una semilla negra, asperita, no lustrosa. Los corimbos ó cimas tienen los brazos pubes- centitos y son formados de corimbitos de 6 á 8 flores verdoso-ama- rillentas, cuyos pedicelos son bracteados por la .inserción , con una sola flor femenina solitaria en el centro de la bifurcación de los brazos y de pedúnculo sin brácteas : curcas, F. 106, T. III, S.-T. II, G. III. 147. Flores de ambos sexos apílalas, 148. — Flores masculinas con una corola de 5 pétalos, mientras las femeninas son de ordinario apétalas; semillas con una carúncula biglandulosa; estambres 10, 20, 5 ó muchos ; flores en espigas amentáceas ó en racimos axilares ó terminales, cuyas femeninas ocupan la base, ó en espigas diferen- tes. Arbustos frútices, matas y plantas herbáceas, ramosas, raras veces resinosos y aromáticos; de hojas simples, no muy grandes, enteras, lobuladas ó aserradas, pecioladas, á veces glandulosas, de un solo color ordinariamente, pero raras veces discolores, pubes- centes ó velludas por ambas caras, ó por la inferior solamente, cuyo pelo es á manera de estrella; estípulas ordinariamente caducas ó á veces persistentes y glandulíferas, filiformes ó foliáceas; perian- tio de limbo dividido en 5, 4, 12 segmentos ó lóbulos valvares ó algo imbricados; en las masculinas hay una corola de 4, 5 pétalos, los cuales son pequeños ó enteramente abortados en las femeninas ; es- tambres distintos de anteras erguidas é introrsas ; ovario oval- trígono, trilocular, cuyas celdillas son uniovuladas, y de cuyo ápice salen 3 estilos de ordinario dicótomos, con los brazos arrolladitos. Fruto capsular formado de 3 carpelos monospermos, pegados de una columna central, de semillas convexo-biglandulosas y provistas de una carúncula, con el rafe distinto : crotón, F. 106, T. III, S.- T. VIL 148. Hojas compuestas, cargando con las flores situadas á lo VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 191 largo del raquis y colgantes ; carpelos con dos semillas ; estambres de2á4, 149. — Hojas nunca jamás compuestas; flores axilares ó terminales en espigas ó racimos mas ó menos bracteados y amentá- ceos; flores femeninas ordinariamente ocupando la base ó á veces en grupos separados, 151. 149. Periantio 4-partido con las divisiones desiguales ; estambres 4 distintos ; ovario 5-2-locular, de cuyo ápice salen 8-5 estilos bífl- dos ; fruto drupáceo ó abayado, con semillas angulosas, colgantes del vértice de la celdilla y provistas de una carnúcula diminuta ; estípulas deciduas, 150. — Periantio 6-5 ó 4-9-partido : estambres 3 ó 2-15-monadelfos; ovario 3-10-locular, acompañado por la base de 5, 6 glándulas ó de un disco glanduloso ó membranoso; estípulas ordinariamente persistentes : árboles bajitos, arbustos, frútices ó plantas herbáceas lampiñas ó pubescentes, de ordinario ramosos, de hojas mas ó menos grandes, cuyas hojitas son enteras ordinaria- mente y dísticas ; flores solitarias axilares ó fasciculadas, situadas á lo largo de los raquises provistos ó no de sus hojuelas, á veces an- drójinas; anteras introrsas; del ápice del ovario salen ordinaria- mente 3 estilos y á veces 10, mas ó menos cortos y bífidos ó lacinia- dos. Fruto capsular, raras veces abayado, formado de 3 carpelos, con una semilla trígona, de ordinario pegada por debajo del ápice y sin carnúcula \ ])liyllantlius ^ F. 106, T. II, S.-T. IV, G. II. 150. Arbustos ó árboles de como 20' á 25' de altura, bastante ra- mosos y algo frondosos, lampiños ; cuyas hojuelas dísticas, enteras y lampiñas son largas de 2 á 3 pulgadas, obtusitas ó puntiagudas, aovadas, elíptico-lanceoladas ú obovado-lanceoladas, casi sentadas; flores monoicas ó dioicas, fasciculadas, axilares ó laterales, pedun- culadas ; filamentos de los estambres alternando con glándulas este- riores ó ceñidos por un disco. Fruto globoso ó deprimid o-globoso con ángulos obtusos mas ó menos pronunciados : cicca, F. 106, T. II, S.-T. I, G. I. 151. Flores en racimos especiformes, ó en espigas amentáceas axilares ó terminales, con brácteas mas ó menos grandes acompa- ñando á las flores, monoicas ó á veces dioicas ; periantio de las mas- culinas 4-partido y el de las femeninas 3-5-partido; estambres 8, 16 saliendo de un disco central, con anteras estrorsas, celdillas li- bres colgando del ápice del filamento, ordinariamente oblongas y torcido-plegadas á la par, 152. — Flores siempre monoicas en raci- mos andrójinos axilares, cuyas flores femeninas sub-solitarias y lar- gamente pediceladas, ocupan la parte inferior; de periantio 3-8- partido, con los segmentos lanceolados y bien enteros ; ovario trilo- cular, trígono, cuyo ápice lleva un estilo 3-fido con los brazos arro- llados ; las masculinas se componen de un periantio 3-partido, con 3, 1 estambres cuyas anteras oblongas ó globosas son introrsas ; fruto capsular formado de 3 carpelos con una sola semilla globosa y sin carnúcula, globoso-trígono y erizado. Mata fruticosa de tallo lar- go, delgado y ramosísimo, trepadora ó abejucada, pelierizada ó alam- piñada, cuyo pelo blanco tieso es punzante y causa mucho escozor, de hojas simples oblongo-lanceoladas, pecioladas, aguzadas, aserra- das ó festoneadas, acorazonadas; racimos filiformes, amentáceos, 192 MÉTODO DICOTÓMICO. tan largos como el pedicelo de las flores femeninas ó mas; brácteas setáceas tan largas como el pedicelo de las flores masculinas : tra- gia, F. 106, T. III, S.-T. YI. 152. Arbustos, frútices ó plantas herbáceas ordinariamente muy ramosas superiormente, lampiñas ó pubescentes, de hojas mas ó me- nos aovadas, oblongas, oblongo-lanceoladas , elípticas, de ordinario aserradas, pecioladas y con estípulas. Flores femeninas en grupos ó en espigas acompañadas de una bráctea grande acrescente frecuen- temente, en forma de cartucho y festoneada, cuyo ovario algo trí- gono y trilocular lleva en su ápice 3 estilos multífidos, raras veces bífidos, con los brazos setáceos. Fruto capsular formado de 3 carpe- los, conteniendo una semilla diminuta sub-globosa, sin carnúcula ó con una apenas visible : acalypha, F. 106, T. III, S.-T. VI, G. I. 153. Flores dispuestas en espádice, 154. — Flores nunca jamás en espádice, 166. 154. Espádice siempre distinto de la espata cuando existe y for- mado de muchas flores, 155. — Espádice adherido á la espata en forma de cartucho, con 2 á 3 flores solamente, de las cuales una sola es femenina; anteras 3-8 adheridas al 4pice del espádice y abrién- dose por un surco transversal y sentadas ; ovario unilocular \ pistia, F. 32. 155. Desnudo y amentiforme ó no, 162. — Provisto de una espata única con figura de cartucho ordinariamente y que le cubre casi á manera de caperuza, rarísimas veces enteramente cubierto de flo- res, 156. 156. Libre, continuo ó interrumpido, andrójino y de vértice des- nudo ó sin flores ; su parte median'^ ^^^iiDada por nectarios ; conec- tivo de las anteras muy espeso y abrui^uelado; ovarios 1 ó plurilocu- lares, 157. — Espádice libre ó adherido inferior y posteriormente á la espata, andrójino y con los nectarios entremezclados con las flores femeninas, raríbimamente de vértice sin flores ; conectivo de las anteras que se abren por poros, espeso pero no abroquelado ; ova- rios 1 ó pluriloculares : plantas herbáceas de tallo leñoso 'inferior- mente y que parece una caña, de base un poco acostada en el suelo y después derecho, alto de 3' á 5', lleno y cuyo diámetro es de 2", nunca ramosa y -criándose en los lugares húmedos ; hojas alternas, largamente pecioladas, envainadoras por la base, oblongo-ovales, cuspidadas, nervosas, al principio aproximadas por el vértice del tallo y mas luego apartadas de él, pero siempre derechas, entera?, algo undulosas por los bordes enteros, coriáceas, largas de 12 á 15" sin el peciolo que lo es de 5 á 8 y anchas de 5 á 5 1|2 ; espádices pe- dunculados, axilares, superiores y dispuestos en una especie de ver- ticilo de á tres. Espata larga de 5"-6", oblongo-arrollada por aden- tro, verde pálido, pegada con la parte esterior é inferior del espádice cuyo vértice blanco amarillento sale apenas por fuera de ella, infe- riormente seudo-hermafrodito, ó andrójino y de vértice masculino, no enteramente libre. Estambres muchos de anteras 3-4-loculares oblongas y pegadas en un conectivo trancado verticalmente, cuyas celdillas paralelas se abren por el ápice á favor de un poro común; ovarios muchos, libres y acompañados cada cual por tres estamino- VEJETá^LES FANERÓGAMOS MONOICOS. 193 des sub-adheridos por la base, con un óvulo único, parietal hacia la base, j ascendente de un funículo corto, ortótropo ; estigma discoi- deo sentado; bajas uniloculares monospermas, de semilla sub-glo- bosa con testa coriácea, espesita y de ombliíro basilar, ancho : dief- fenUckia, F. 8, T. I, S.-T. II. 157. Tubo de la espata persistente; parte mediana del espádice las mas veces desnuda, con el apéndice estéril y algunas veces apenas notable ó nulo ; algunas anteras co-adheridas ; ovario 1-4- locular ; savia á veces como lechosita ; sin estípulas ; raices fre- cuentemente tuberculosas, 159. — Espata persistente enteramente ó decidua, 158. 158. Espata persistente, 158 lis. — Espata decidua enteramente, convoluta ó arrollada ; vejetal de tallo recto, alto de 5' á 6', leñoso, con grandes hojas aflechadas y largamente pecioladas ; espádice li- bre continuo, andrójino, sin órganos estériles ningunos, ni apéndi- ce estéril tampoco; anteras 4-loculares, pegadas por el lado de un conectivo conoideo y truncado, cuyas celdillas son dispuestas por pares y confluentes por el ápice, y dehiscentes por una grieta; ova- rios muchos, libres, uniloculares con un solo óvulo ortótropo ascen- dente y con funículo corto; estigma terminal, sentado, no simé- trico, festoneado y marjinado. Baya esponjosa, sin endospermo por causa del embrión que va creciendo y llena la celda : montrichaT' dia, F. 8, T. I, S.-T. III. 158 iis. Espata persistente entera y cerrada después de verifica- da la fecundación ; espádice continuo andrójino, de apéndice estéril nulo ; anteras libres; ovarios multiloculares; savia nunca lechosita; estipulas elongadas, opositifolias y deciduas, raiz no tuberculosa : plantas herbáceas de tallo larguísimo trepador, ramoso y carnudo, con hojas apartadas, alternas, mayores, pecioladas y envainadoras por la base del peciolo, enteras, lobuladas ó partido-laciniadas. Es- pata de base rollada por adentro ó en espiral sobre si misma ; nec- taños por debajo de los estambres ; anteras biloculares distintas 2, 7, de dorso areolado y cuyas celdillas se esconden en el conectivo, abriéndose por el ápice ; ovarios muchos aproximados y libres 5, 15- loculares, óvulos incorporados desde el ángulo central de la celdilla y ortótropos; estilo cortísimo ó nulo ; estigma cabezudo, truncado ó radiado subulado ; bavas discretas polispermas : philodendron, F. 8, T. I, S.-T. III. 159. Espádice interrumpidamente andrójino, 159 Ms. — Espádice andrójino sin interrupción con nectarios rarísimos situados por de- bajo de los estambres, de apéndice estéril nulo, con espata derecha y enrollada por la base. Anteras 4, 5 biloculares pegadas en un co- nectivo troncado y anguloso, cuyas c^eldillas salen por los ángulos opuestos, abriéndose por poros situados en el ápice ; ovarios mucho? uniloculares, enteramente reunidos entre si, con óvulos solitarios, basilares, sentados y ortótropos ; estigmas distintos, sentados y blanco-glutinosos; bayas plurimas reunidas y monospermas. Plan- tas herbáceas trepadoras, de- tallo mas á menos largo y blando, cau- noso, de hojas grandes palmeado-partidas, pecioladas; pedúnculos TOMO I 13 194 MÉTODO DICOTÓMICO cortos y desnudos; espalas de color suciamente amarillento-verdo- sas : syngorium, F. 8, T. I, S.-T. II. 159 Ms. Espala enrollada en espiral sobre sí misma, derecha ; nectarios situados siempre por debajo de los estambres ; apéndice estéril del espádice siempre nulo; anteras uni ó biloculares ; ovarios muchos, aproximados y nunca uniloculares , 160. — Espala derecha, acogollada y nunca enrollada; nectarios situados tan pronto por de- bajo como por encima de los estambres ; apéndice estéril del espá- dice claTiforme ó aguzado; anteras biloculares siempre, plurimas, pegadas á manera de verticilo en los conectivos conoídep-troncados, sentadas ó sub-estipitadas y distintas, cuyas celdillas contiguas se abren por un poro común ; ovarios aproximados, plurimos, libres y siempre uniloculares, con óvulos colocados sobre tres placentas pa- rietales y hacia la base, derechos y ortótropos. Plantas herbáceas de rizoma tuberculífero ó caulescente, y en este último caso con ta- llo trepador ; hojas mas ó menos grandes abroqueladas, redondea- das mas ó menos y pecioladas ; pedúnculos solitarios ó saliendo al- gunos de la misma axila, acostados v vajinados : colocasia, F. 8, T. I, S.-T. III. 160. Espala enteramente enrollada; anteras muchas unilocula- res, distintas, pegadas en verticilo en los conectivos claviformes y troncados, abriéndose por un poro situado en el ápice, 161. — Espala convolula solamente por la base ; anteras biloculares, muchas, dis- tintas, pegadas á manera de verticilo sobre conectivos conoídeo- tróncados, cuyas celdillas contiguas se abren por grietas situadas por el ápice; ovarios muchos aproximados, con estilos espesísimos placenliformes y coherentes, sub-cuadriloculares, cuyas celdillas contienen muchos óvulos horizontales é insertos por la parte media- na del eje; los estigmas, anchos, deprimidos y lobulados, son ama- rillento-glulinosos ; baya. Plantas herbáceas, de rizoma caulescente derecho, tuberculífero, con hojas radicales grandes, largamente pe- cioladas y asaeladas ; pedúnculos sub-solitarios saliendo de la vaina délos peciolos; espala amarillenta: xanthosoma, F. 8, T. I, S.-T. III. 161. Plantas herbáceas de rizoma tuberculoso ó no, con ó sin ta- llo mas ó menos falso, con hojas radicales largamente pecioladas abroquelado-alabardadas ó multífidas, de cara superior muy lisa y lustrosa, mientras por la inferior las venas forman una especie de redecilla; bojordos solitarios, sin brácleas y elongados; espata blan- quecina ; ovarios libres biloculares, con estigma sentado, terminal y discoideo ; óvalos 2-4 en cada celdilla y situados sobre las suturas, ascendentes con funículo corto y ortótropos. Bayas uni ó bilocula- res, oligospermas, cuyas semillas angulosas tienen testa coriácea y espesita; ombligo basilar y ancho : caladium, F. 8, T. I, S.-T. IIÍ. 162. Vejelales parásitas sin hojas, mas ó menos coloridos pero nunca verdes. Flores femeninas con el periantio tubuloso y trilo- bulado, mientras el de las masculinas es apenas notable, 164. — Ve- jelales nunca parásitas y con hojas verdes, de espádice amentiforme cubierto de flores, interrumpido por hojas pequeñas que unos tienen por espalas; cáliz escarioso ó piliforme, 163. 163. Plantas herbáceas bastante altas, cuya caña delgada y de- YEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 195 rcclia ^ale, así como las hojas radicales, de una especie de rizoma poco desarrollado y que se crian en los lugares húmedos y se eleyan á 4' ó 6' de altura ; hojas radicales alternas, largas de 2'-3' y mas, de base envainadora, lanceoladas, muy largas, derechas y estre- chas; boyordo ó tallo saliendo del centro de las hojas, cilindrico, largo y derecho, terminándose por una espiga amentiforme ó espá- dice, continuo ó interrumpido por algunas espatas foliáceas cadu- cas, cilindrico, bastante grueso, cuyo vértice es masculino y la base femenina ; muchas anteras sostenidas por filamentos filiformes v de vértice cortamente 2 ó 3-fido ó ahorquillado, basifijas, oblongas, bi- loculares y con 4 celdillas, echando mucho polen amarillo por afuera del espádice. Las flores femeninas son formadas de un ovario sa- liendo inmediatamente del eje, y agrupadas sobre protuberancias á propósito y acompañadas ds muchas cerdas sud-claviformes, al principio sentado y por fin estipitado, unílocular, con un óvulo úni- co, anátropo y colgante del vértice de la celda; estilo simple conti- nuo con él y de estigma unilateral linguiforme ; el fruto es una es- pecie de cariópside ó drupáceo, con la semilla inversa, de base soldada con el endocarpio : typlia, F. 9. 164. Espádice ovoideo ó globoso, andrójino, cubierto de brácteas abroquelado-hexágonas, 16.5. — Espádice oblongo cilindrico, con brácteas imbricadas deciduas; rizoma espeso y ramoso,, de donde sale un tallo rojo largo de como 6", cubierto de escamas aplicadas sobre él, dispuestas por 4 ó por 6 series opuestas, las cuales se vuel- ven brácteas también aovado-deltoideas tuberculadas por el vértice y con rudimentos de flores; espádice largo de 1"-2 1í2"; columna anterífera dividida en 3 brazos por debajo del cuerpo globoso, for- mado por las anteras reunidas, con 6 celdillas y abierto por el ápi- ce \ 2)liyUocoryne, F. 46. 165. Rizoma ramoso de cuyos nudos salen tallos desnudos altos de 2"-6"-12", cuya base está envuelta por una vaina anular 3-4 6 5-7-lobulada ; espádice encerrado en el involucro vajinal antes de desarrollado el tallo ; flores masculinas tardias; columna con tres estambres, dividiéndose en 3 brazos por debajo del cuerpo formado por la reunión de las anteras, con 6-12 celdillas insertas en la gar- ganta del cáliz; anteras introrsas; cáliz de las femeninas apenas no- table ; ovario simple, con un óvulo erguido desnudo ; estilos 2 ; se- millas adherentes con el pericarpio crustáceo : lielosis, F. 46. 166. Flores desnudas de inflorescencia andrójina y colocadas muchas en la superficie de un receptáculo rjias ó menos llano alveo- lar y terminal en el ápice de un boyordo mas ó menos largo ; estam- bres 2-4; estilo lateral bi-dentado, 167. — Flores nunca desnudas ni agrupadas tampoco sobre un receptáculo, pero sí siempre provis- tas de envoltura floral mas ó menos completa, 168. 167. Plantas herbáceas pequeñas sin tallo lejítimo, pero con un rizoma mas ó menos desarrollado, escamoso, nudoso, simple, del ápice del cual salen hojas simples, alternas, largamente pecioladas, palmatífidas ó palmati-partidas , repando-enteras ó espatulado- oblongas y solamente festoneadas, mas ó menos acorazonadas por la base, ásperas, alampiñadas ó lampiñas, membranosas ; estípulas 196 MÉTODO DICOTÓMICO. persistentes; receptáculo abroquelado cuadrangular , orbicular- dentadito ó ciatiforme-orbicular ; fruto capsular irregularmente bi- valve ; embrión ganchoso sin endospermo : dorstenia, F. 41, G. IV. 168. Flores siempre glumáceas ó sin cubierta floral lejítima, 169. . — Flores nunca glumáceas, pero cuya envoltura floral lejítima es simple ó doble, 1'73. 169. Masculinas en panojas terminales, mientras las femeninas son en espigas cilindricas axilares, mazorcas ; 3 estambres, 172. — Flores masculinas j femeninas en panojas terminales, 170. 170. Estambres seis, 171. — Estambres 3 : yerbas pequeñas, de tallo delgadito, alto de 6" á 8", con hojas alternas, envainadoras y de vaina cerrada, á veces alada, linear-lanceoladas ó lineares; flo- res en espigas ó panojas flojas, formadas de espiguitas multífloras para las masculinas y unifloras para las femeninas; constando de glumas dísticas ó trísticamente imbricadas, cuyas inferiores son or- dinariamente menores, alado-aquiladas; ovario con estilo continuo, bi ó trífido ; disco distinto, ciatiforme, sub-cilíndrico, lobulado, re- pando ó troncado, coriáceo, corchoso ó membranoso cartáceo, á ve- ces cerdoso, pubescente, adherente sólidamente á la cariópside huesosa, sub-globosa, en forma de botella ó lenticular blanca ó atro- purpúrea : scJeria, F. 11, T. 11. • 171. Yerba de como 1' á 2' de alto mas ó menos, según la feraci- dad del sufelo en que vejeta, de caña delgada, ramosa y derecha, cuyas hojas envainadoras y alternas son lanceoladas, puntiagudas, nervosas, largas de como 8" á 10" sobre 2"-3" de ancho, de vaina abierta cuya parte superior está provista de una lígula membranosa acompañada de una hilera de pelos. De adentro de la vaina de las hojas superiores sale una panoja pequeña parecida á la que termina el tallo, formada de 15 á 20 espiguitas largas como de 2"-3", com- puestas de grupos de 4-5 flores situados sobre cada diente del eje, de suerte que cada espiguita lleva como 30 ó 40 flores ovales, ama- rillas que constan de una gluma uniflora de 2 valvas, que contiene una glumela muy delgadira y también de 2 ventallas, y dos escami- tas ó pajitas lampiñas acompañando el rudimento del ovario; las flores femeninas no tienen las escamitas ; ovario sentado con un es- tilo con 3 estigmas peludos. Cari(3pside linear encerrado en la pa- lea inferior de la glumela : pharus, F. 10, T. I. 172. Planta herbácea anual cuya caña, bastante gruesa, llena y simple, se eleva á 4'-6' de altura, con hojas alternas, envainadoras por la base, bastante grandes, sentadas, lanceoladas, basinervias, cuya vaina abierta está provista interiormente y por el ápice de una lígula corte y pestañosa. Panojas masculinas terminales grandes, amarillentas, con flores á veces polígamas y que constan de una gluma con 2 fiores y bivalves, de una glumela con dos ventallas sin ariteta; e:^tambres de filamentos filiformes sosteniendo anteras gran- des y colgantes ; las espigas femeninas ó mazorcas de 1 á 3 por cada caña, blancas, largas de 1" á 2" y formadas de flores solitarias y dispuestas por series verticales, están encerradas en vainas foliáceas bastante numerosas, formando así una especie de estuche cónico, por el ápice del cual sale como un penacho blanco ó barba, pendiente. VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 191 formado por los muchos estilos larguísimos y filiformes que llevan así afuera dos estigmas subulados j pubescentes que les terminan; las flores femeninas así alineadas simétricamente en un eje central grueso y bastante carnudo al principio son formadas de una gluma de dos Yentallcis obtusas y membranosas, de una glumela con dos valvas redondeadas provistas de una arista muy pequeña; ovario único grueso y globoso. La mazorca madura es larga de 3" á 6" ó hasta mas, con 12 A 16 series verticales de cariópsides ó granos gruesos, redondos, lisos, lustrosos, como crustáceos, de ordinario amarillos, otras veces blancos y mas raras veces morad úseos, etc., de base cuneiforme, y mas ó menos comprimidos y á veces un poco, con 4 caras, lo quo proviene de la compresión mutual que esperi- mentan durante su desarrollo, porque los de las dos estremidades son bien redondos en número de S-MOO y hasta mas por cada ma- zorca: 2^ea, F. 10, T. II. 173. Flores femeninas conteniendo muchos ovarios pequeños, li- bres y agrupados a manera de cabeza sobre un receptáculo esférico; vejetales de los lugares pantanosos, 174. — Flores femeninas con un ovario único infero ó supero, 175. 174. Yerbas lampiñas sin tallo pero con un bojordo de 1' á 3' y mas de alto, con hojas simples, largamente pecioladas, todas radi- cales, alternas, envainadoras por la base del peciolo, asaetadas, ova- les y elíptico-lanceoladas. Flores blancas cuyas superiores son mas- culinas, dispuestas en panojas ó racimos terminales y cuyos pedicelos son en umbelas ó verticilos ; de cáliz con 3 sépalos y de corola con 3 pétalos mas grandes que los sépalos, é imbricados; muchísi- mos estambres amarillos en el centro de las flores masculinas hay cuyas anteras son tan pronto mas largas como mas cortas que los filamentos, los cuales están reemplazados en las femeninas por mu- chos ovarios uniloculares, 1-ovulados, dispuestos por series sobre un torus convexo, sentados ; estilo ventral cortísimo terminado por un estigma obtuso. El fruto es un aquenio comprimido, mucronadito y alado : sagittaria, F. 30. 175. Siempre adherente ó infero, 176. — Siempre libre ó supero, 194. 176. Periantio doble lejítimo ó formado de un cáliz y de una co- rola ; plantas de ordinario herbáceas, provistas de zarcillos estrape- ciolares simples ó ramosos; estambres 3-5 de ordinario triadelios ; fruto carnoso, bacciforme mas ó menos grueso, 178. — Periantio simple, de sépalos dispuestos en dos series, cuyas esteriores ordina- riamente mayores son coloridos mas ó menos ; muchos estambres libres; fruto capsular alado; siempre sin zarcillos, 177. 177. Vejetales herbáceos, sub-leñosos ó sub-leñositos, cuyas par- tes herbáceas son suculentas, lampiños ordinariamente ó pubescen- tes y hasta peludos, cuyos mas altos se elevan como de 6' á 8' de altura y los mas bajitos á 2"-6'' ; de hojas mas ó menos espesas y carnosas, alternas y mas frecuentemente dísticas, simples, peciola- das, enteras, angulosas, dentadas ó festoneadas, oblicuas, con fre- cuencia acorazonadas por la base, algunas veces de dos colores, con estípulas deciduas y á veces persistentes. Flores en cimas dicótomas 198 MÉTODO DICOTÓMICO. axilares, pediceladas, de un periantio cuyos sépalos algo coloridos son en igual número en ambos sexos ó diferente, 2, 3, 4, 5 dispues- tos en esos dos últimos casos en dos series, distintos j desiguales, de los cuales 2 son ma^'ores, opuestos y mas esteriores y ordinaria- mente coloridos; estam^bres muchos. Ovario infero 3, 2, 5-locular, poliovulado, de cuyo vértice salen 3 estilos bipartidos ó bífidos, tor- cidos, enteramente papilosos ó provistos de una faja continua ó semi- lunar j papilosa; cápsula con 3 alas mas ó menos desiguales, con los placentas bilamelados ó enteros, abriéndose por 3 ventallas, conte- niendo muchas semillas diminutas de embrión sin endospermo; ho- jas ordinariamente de sabor ácido bien pronunciado: hegonia, F. 137. 178. Frutos siempre indehiscentes, 181. — Frutos dehiscentes sea que se revienten en valvas desiguales, sea que se abran natural- mente por un opérenlo ó tapa situado en su ápice, 179. 179. Reventándose después de maduro con elasticidad por el ápice en 3 partes desiguales y quedándose carnudo, 180. — Fruto vol- viéndose seco después de maduro y conteniendo entonces una masa fibrosa dispuesta en redecilla y con 3 celdas lonjitudinales, conte- niendo muchas semillas; abriéndose por una tapa que se desprende naturalmente llevando consigo el ápice : flores masculinas en raci- mos axilares ó terminales, largamente pedunculados y con pocas flores sentadas ó cortamente pediceladas formadas de un cáliz 5- fido, de tubo cortamente campanudo, corola profundamente 5-par- tida; 5 estambres 3, 2-adelfos, de anteras distintas con las celdillas flexuosas y situadas por la márjen del conectivo sinuoso ; en las flo- res femeninas que son solitarias y axilares, el cáliz es adherente también o-fido, pero con el tubo claviforme; corola conforme; ova- rio trilocular, multiovulado, de cuyo vértice mas ó menos prolon- gado sale un estilo corto trífido, de estigma espeso arriñonado, bi- lobulado ó bipartido. Fruto bacciforme mas ó menos largo, cilindrico ó algo trígono, ovoideo y provisto de púas; semillas negras compri- midas, reticuladas ó escrobulíferas. Plantas herbáceas anuales, de tallo largo, delgado, ramoso, áspero, mas ó menos pubescente, tre- pador, anguloso ó cilindrico, con hojas alternas, largamente pecio- ladas, mas ó menos lobuladas, acorazonado-redondeadas, alampiña- das ó lampiñas y ásperas; zarcillos 3-fidos ó sencillos : lufa, F. 141, T. II, G. ly. 180. Plantas herbáceas enredaderas y trepadoras, de tallo her- báceo mas ó menos largo, muy ramoso y alampiñado, con hojas al- ternas, largamente pecioladas, mas ó menos lobuladas, con los ló- bulos sinuoso-aserrados ó dentaditos; zarcillos simples pelierizados ó lampiños. Flores solitarias largamente pedunculadas, con una bráctea redondeada y entera ó acorazonada y dentadita situada ha- cia la parte mediana ó el vértice del pedúnculo, constando las mas- culinas de un cáliz campanudo 5-fido, cuyos lóbulos óvalo-lanceola- dos son mas largos que el tubo muy corto; corola profundamente 5-partida y casi 5-petalea-campanuda ; estambres 5-triadelfos, de anteras uniloculares, todas adheridas y cuyas celdillas lineares son dobladas por arriba y por abajo; flores femeninas de cáliz adli érente 5-fido, con tubo mas ó menos largo y estrecho; ovario con tnbércu- VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS, 199 los Ó crestas mas ó menos ovoideo, 3-lociilar, con muchos óvulos dispuestos en una serie en cada celda; un estilo 3-fido terminado por un estigma recortado. Fruto oblongo ó elíptico con tubérculos, ú oblongo-elíptico largo de 5 á 6 pulgadas y con crestas lonjitudi- nales muy pronunciadas ; semillas comprimidas mas ó menos lobu- ladas V envueltas de carne á manera de arilo : momordica, F. 141, T. II, Ct. II. 181. Estambres triadelfos, 182. — Estambres monadelfos, 184. 182. Fruto pequeño elíptico-oblongo color de aurora cuando ma- duro, unilocular polispermo ; flores pequeñas as-rupadas j entre- mezcladas las de ambos sexos; estambres 3, 183. — Fruto mas ó menos grueso 3, 5, 6-locular ; estambres 5 triadelfos, 185. 183. Vejetales vivaces de tallo muy largo, muy ramoso superior- mente, con ó sin un crecido cónico á veces bastante grueso por la base, de cuya parte inferior salen las raices fibrosas, del tamaño del dedo pulgar hasta el del brazo de un niño de un año, muy blando, que se corta y rompe con mayor facilidad , casi cilindrico un poco asurcado, algo nudoso, de corteza muy agrietada; en su corte trans- versal las fibras están dispuestas en haces triangulares formando como una estrella ; los ramos nuevos están en zig-zag y salen dicó- tomos de un crecido ó nudo mas ó menos pronunciado ; en cada án- gulo saliente formado por tal disposición se observa una especie de nudo ó pezón de donde sálenlas hojas, las ñores y uno ó á veces dos zarcillos estraxilares persistentes después de desprendidos los dos otros órganos y que sostienen el bejuco en la'jcima de los árboles que habrá alcanzado, como suele hacerlo ; los ramos tiernos son cilin- dricos, lampiños, de un color verde mas subido y como teñido de listre] los otros ramos parecen estriados por causa de las muchas grietas lonjitudinales de la epidermis; tal bejuco presenta hacia su parte inferior muchas estomas que están sin embargo esparcidas por toda su superficie; es bastante carnudo; en su corte transversal se ve una especie de estrella con 10 á 12 radios m.as ó menos, segiin su tamaño, y en caso de ser bastante grueso son bifidos hacia la cir- cunferencia. Hojas simples, alternas, largamente pecioladas, bas- tante grandes mas ó menos, 5-lobuladas, denticuladas, blanquecinas y pubescentes, así como el peciolo, que es algo estriado, de cara su- perior lustrosa, verde oscuro con algunos pelos blancos ; zarcillo simple, fuerte y de vértice en espiral. Flores pequeñas color de bistre ó un poco mahon, cuyas femeninas muchas, sentadas y dispuestas en grupos bien furnidos situados en derredor del pezón señalado en el ángulo saliente de las ramitas, en donde se va alargando mas ó menos para formar el eje grueso de la espiguita de flores masculi- nas pediceladas y dispuestas en espiral, cuya base está ocupada por las femeninas raras veces entremezcladas con las masculinas, se van floreando sucesivamente y poco á poco, de tal manera que sobre el mismo pezón se ven con frecuencia frutos maduros, flores abiertas y otras en capullo naciente; las masculinas constan de un cáliz ciati- forme por la base, con 5 divisiones profundas, abiertas al principio, pero mas tarde dobladas por afuera, de tal manera que su ápice al- canza casi la base, lanceolado-ovales, de bordes algo arrolladitos, de 200 MÉTODO DICOTÓMICO. cara superior que fué interior como aterciopelada y convexa, mien- tras la inferior es cóncava con algunos raros pelos blancos que se hallan también en la base calicinal color de bistre ; capullo oboval, de ápice truncado y con 5 estrías bien pronunciadas y salientes, co- lor bistre subido ; prefloracion valvar ; corola de 5 pétalos alternos, con las divisiones calizinales; insertas en la garganta del cáliz, con- niventes y formando así casi una pirámide en el centro de la flor, algo mas pálidos, lanceolados, puntiagudos, con los bordes y el ápice un poco arrollados, cuya cara esterior es lampiña y cóncava, mien- tras la interna ó superior es convexa, y con unos pelos blancos, lar- guitos y algo tiesitos; estambres 5 triadelfos, erguidos, libres, opuestos á los pétalos correspondientes é insertos un poco por de- bajo de ellos, de filamentos cortos, erguidos y con pelo blanco por la base, mientras la mitad superior de ellos es lampiña, cilíndrico- subulados, converjentes de manera que están situados oblicuamente de afuera por adentro, con anteras color de oro, uniloculares y se- paradas por un conectivo algo carnudo, verde, oblongo y cuyo ápice se prolonga un poco mas allá que ellas, de ápice terminado en pico algo doblado hacia fuera, cuya cara superior con pelo blanco en sus 2[3 superiores tiene l[o inferior lampiño así como el dorso, que se inserta perpendicularmente un poco mas arriba de la base en el ápice del filamento; uno de los 3 conectivos lleva una sola antera, faltando siempre la otra ; tales anteras se abren por medio de un surco lateral tan largo como ellas. Si al contrario se consideran los estambres como no triadelfos, entonces serán 3 solamente, de los cuales 2 tienen una antera bilocular, mientras el tercero la tiene unilocular por causa de aborto de una celdilla. Mientras las flores femeninas, mas pequeñas pero mas largas, cuya parte inferior ó correspondiente al ovario, alargada, cilindrica y lisa, es lampina 6 alampiñada, lustrosa, color bistre algo mas claro que el del capullo ovoideo y con 5 estrias salientes y mucho mas pequeño que el de las niasculinas, separado del ovario por el tubo calizinal mas estrecho, son formadas de un cáliz adherente de limbo campanudo, cuyos 5 segmentos y los 5 pétalos de la corola son conformes con los de las flores masculinas v de isrual inflorescencia ; en el centro se observa un cuerpo glanduloso, como semi-diáfano y de color amarillento algo mas pálido que las demás partes de la flor y lobulado, que constituye el estigma terminando un estilo simple saliendo del ápice del ovario infero, pero cuyo ápice bífido lleva en cada brazo un es- tigma glanduloso multilobulado ; ovario elongado, cilindrico, algo cónico, unilocular y con muchos óvulos. Fruto abayado aovado ó elíptico, largo de como Z'"-^" sobre V'-l^l"' de ancho, algunas ve- ces algo mas estrechito por la base y como anguloso por causa de haber sido comprimido por los vecinos, de ápice umbilicado; al prin- cipio su color es uniforme y mejor teñido de bistre, pero luego se vuelve mas oscuro y está adornado de unas 10 listas lonjitiidinales color verdusco oscuro; la parte que las separa está salpicada de pun- titos rojizos ; siguiendo sazonándose se matiza de morado y por fin se vuelve color amarillo rojizo ó color aurora, y entonces ya está ma- duro. Contiene una especie de pulpa amarilla-canario poco abun- YEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 201 dante, que se halla entre las semillas, la cual se va desecando y la fruta se seca, y entonces es torrulosa, conteniendo muchas semillas pequeñas, separadas las unas de las otras por una especie de mem- brana semi-transparente j muv delgada, son de color gris oscurito, irregularmente piriformes j de superficie asperita : doyerea, F. 141,T. II,G. V. 184. De anteras distintas con las celdillas encorvadas por arriba j también por abajo ; flores masculinas en racimos axilares espici- formes y largos de 8 á 12", con una flor femenina solitaria saliendo de la misma axila, amarillentas, de como 3" de diámetro, mientras las femeninas son anchas de h'" á 6'", y de cáliz 5-dentado adhe- rente en las femeninas; corola rotácea cuyo tubo carga con 10 glán- dulas nectaríferas ; ovario unilocular con un solo óvulo pendiente; fruto ob-aovado-oblongo, algo comprimido, lampiño y de ordinario erizadito con pelos algunos blancos algo punzantes, y con 5 surcos lonjitudinales, largo de como 4" á 6" y ancho de 2"-2 li2", cuya semilla única aparece por la base y con frecuencia germina antes que se desprenda y colgado todavía del bejuco, pedunculado color blanco amarillento ó verdoso. Planta vivaz cuyos tallos herbáceos muy largos y muy ramosos salen de una raiz carnosa perpendicular bastante gruesa, lisa y lampiña, con hojas simples largamente pe- eioladas acorazonado-5-angulosas, puntiagudas, largas de 5" hasta el seno y de T' hasta la parte mas inferior del lóbulo basilar ; pe- ciolo larii'o de 4-5", y anchas de *7"; zarcillos 3 ó 5-fidos : secMum^ F. 141, T. III. 185. Estambres de anteras biloculares ; fruto con 3 ó 5 celdas, 185 Ms. — Estambres de anteras uniloculares, de celdilla linear, adherida como al revés y casi en espiral por la márjen dorsal del conectivo inciso y trílobo; ovario 3-6-locular. Yerbas anuales, de tallos largos, ramosos, pubescentes, tendidos por el suelo, con hoja's alternas, simples, pecioladas, erguidas, de base acorazonada, loba- das con los lóbulos pinatisectos, pubescentes ó enteros; zarcillos 2- 3-fidos. Flores solitarias, axilares, pedunculadas, cáliz de limbo profundamente 5-fido, llanito, con las lacinias lanceolado-lineares, de cuyo fundo sale la corola 5-partida, plana, sub-enrodada; es- tambres 5 insertos en la base de la corola, triadelfos y de filamentos cortos. Las flores femeninas difieren de las masculinas solo porque tienen el ovario infero ó adherido con el tubo calizinal globoso, y estambres rudimentario? ; ovario con las placentas parietales y multiovuladas; estilo cilindráceo. trífido con los estigmas convexos., reniformes acorazonados. Fruto á veces muy grueso, de carne sólida y colorada ó color de carne, polisperma, con las semillas prietas obaovadas , comprimidas, troncadas por la base y obtusas por la márjen; embrión sin endospermo con los cotiledones foliáceos, plano-convexos, y la raicilla cortísima y centrífuga .• citndlus, F. 141, T. II, G. X. 185 lis. Siempre con 3 celdas ó á veces 4, con algunas semi- llas, 186. — Con 5 celdas polispermas ; planta herbácea de tallo lar- guísimo y muy ramoso qué trepa por encima de los mas altos árbo- les, estriado, pelitieso, con hojas alternas, largamente pecioladas, 202 MÉTODO DICOTÓMICO simples, de limbo bastante ancho, con 5 lóbulos desiguales, undulo- sos, enteros y poco profundos, como arriñonadas por la base ; lar- gas de b", sin el peciolo, que lo es de 2 1|2 á 3", y anchas de 1"; seno ancho de 1 lf2" ; flores masculinas en espigas ó racimitos pe- duncnlados, mientras las femenina.s son solitarias, todas axilares y amarillas, las primeras constan de un cáliz campanudo sostenido por un pedicelo corto, con 5 segmentos amarillentos, triangulares, puntiagudos, pubescentes, largos de como lf2", abiertos, casi hori- zontales y estendidos, pero que doblándose mas luego por afuera de su ápice se aplica al pedicelo y así envuelven y tapan la base calici- nal ; corola de preñoracion torcida é imbricada, de manera que el capullo es casi como una flor ó capullo de granada amarilla ; cuando abierta es campanuda, bastante grande, con 5 lóbulos ovoideos algo aguzados, espesos, undulosos, pubescentes, de color mas pálido este- rior que interiormente é insertos en la garganta calizinal, conte- niendo 5 estambres 3 adelfos que aparecen en el fondo de la flor con figura de una esfera gruesa con tantas circonvoluciones ; la base del cáliz está forrada interiormente por un disco de color amarillo anaranjado carnudo y que se estiende hasta la garganta en donde se insertan los estambres. Las flores femeninas se componen de un cáliz adherente, de tubo estrechadito sosteniendo un limbo infundi- buliforme de color amarillento, con 5 ses:mentos derechos triancru- lares, verduscos hacia la punta ó ápice que se dobla por afuera, pubescentes, sinuosos y venosos ; corola saliendo de la garganta del cáliz, de prefloracion torcida, campanuda y con 5 lóbulos profundos ó pétalos, espesitos; ovario largo grueso, cilindrico, al principio velludo, pero que mas tarde se vuelve lampiño, lustroso y amari- llento, con una linea circular mas verde que indica su inserción con el pedúnculo casi tan grueso como él y bastante larguito, de cuyo 'ápice sale un estilo corto, simple, que se termina por un estigma grueso, amarillento, con un surco verde que se va diliatando hasta alcanzar al estilo, de 3 lóbulos muy gruesos, como arriñonados y anfractuosos á la par. Fruto liso, lustroso, de color moradusco, con matices colorados, largo de 12" á 18" y ancho de 3"-4", color ama- rillo-canario interiormente ; con 5 celdas casi triangulares y cuya cara esterna es casi acorazonada, conteniendo muchas semillas ; que parecen casi un insecto, chatas, ovales, obtusas, de base algo acora- zonada, mientras el ápice es algo aguzado, con el ombligo por el lado, provistas de un ribete negro por la circunferencia, que es de- limitada por una cintita amarillenta, no lustrosas, con una de las caras algo convexa y la otra llana, negruzcas con vetas algo mas claritas : sicana, F. 141, T. II, G. XII. 186. Corola formada de 5 pétalos distintos, 187. — Corola siem- pre monopétala, mas ó menos 5-partida, 189. 187. Ovario con 3 celdas, conteniendo muchos óvulos, 188. — Ovario con 4 celdas recojido ó estrechado por debajo del limbo cali- zinal, y conteniendo muchos óvulos ; planta herbácea vivaz cuyos tallos delgados abejucados y lampiños salen del ápice de una raiz tuberculosa muy gruesa, ancha de 4"-6", con hojas membranosas, largamente pecioladas, alternas, ásperas y alampiñadas, partidas VEJETALES FANEEÓGAMOS MONOICOS. 203 en 3-5 lóbulos aovados, puntiagudos j sub-enteros, anchas de 3"- 1" ; zarcillos simples. Flores masculinas en racimos ó corimbos pe- dunculados, mientras las femeninas son solitarias; en ambos sexos se componen de un cáliz claviforme, de una corola cuyos pétalos blanquecinos ;?on bífidos, con los lóbulos corvos lateralmente j agu- zados, largos de 4'", las masculinas contienen 5 estambres insertos por la parte interior del tubo calizinal, con 3 anteras, sub-sentadas j oblongas, cujas celdas derechas son situadas en la márjen de un conectivo entero. Fruto abaj^ado con semillas globosas : ceo-atosan- thes, F. 141, T. II, G. XIII. 188. Planta herbácea anual muj velluda, de tallo largo rastrero y muy ramoso, delgado y saliendo de una raiz fibrosa, con hojas simples, alternas, acorazonado-redondeaditas, sub-enteras, denta- ditas, biglandulosas por la base, muy velludas y blanquecinas, lar- gas de 3 1|2 hasta el seno, 7 1|2 hasta la parte mas inferior, del lóbulo basilar, sin el peciolo, que lo es de 3, 4, 5 y anchas de 5 1|2" ; zarcillos dividido^; flores blancas solitarias largamente peduncula- das, de cáliz monosépalo campanudo, cortamente 5-fido ó 5-dentado; corola ancha de 2", con pétalos obaovados y estendidos; anteras distintas con las celdas flexuosas y situadas en la márjen de un co- nectivo sinuoso. Fruto de tamaño y de forma muv variados v siem- pre provisto de un casco ó concha leñosa muy fuerte : Icígenaria, F. 141, T. II, G. YII. 189. Cáliz 5-fido, 190. — Cáliz 5-dentado, 192. 190. Corola 5-partida campanuda ; flores siempre amarillas, cuyas masculinas son solitarias ó fasciculadas y las femeninas siempre solitarias, fruto á veces bastante grueso y de forma muy variada, 191. — Corola profundamente 5-lobulada, infundibuliforme y enro- dada á la par; flores de color verdusco-blanco bastante grandes 1 1{2'' de diámetro y todas solitarias ; fruto ovoideo del tamaño de una naranja, lampiño, amarillento y con 9 semillas solamente. Tallo delgado, anguloso y lampiño, abejucado, trepador y muy ramoso, de hojas membranosas, lampiñas, anchas de 4''-2", lijeramente acora- zonadas por la base, redondeaditas ó aovadas cuando enteras, pun- tiagudas, 3-fidas, con los lóbulos laterales abiertos, deltoídeos y con dientecitos apartados y diminutos, pecioladas ; zarcillos simples; pedúnculos sin brácteas, largos de 2" en las flores masculinas y mas cortos en las femeninas; el cáliz de las primeras, largo de 8'" y pu- bescente, tiene el tubo turbinado mitad tan larG:o como los lóbulos v por fin mas grande, de lóbulos abiertos aovado-lanceolados, por fin distantes y separados por un seno truncado j lijeramente dentado ; el de las segundas es cupuliforme con el tubo alto de 5'" y ancho de 6"'-8'" por el ápice, dos veces tan largo como los lóbulos lanceolados y distantes; corola papilosa esteriormente y pubescente, con pelo esparcido y gruesito interiormente, larga de 1 1[2", con lóbulos ao- vado-oblongos, enteros, 3 veces tan largos como el tubo ; estambres 5-triadelfos ; 3-5 filamentos distintos, peludos é insertos por la base de la corola, cuyas anteras reunidas en una columna cilindrica, larga de 4"' y ancha de 2 li2'", son cortamente escedidas por 5 lóbulos del conectivo, de celdillas inclinadas por arriba y por abajo y con 3 an- 204 MÉTODO DICOTÓMICO. fractuosidades paralelas; estilo ensanchado por el ápice, terminado por un estigma 3-lobulado, redondeadito, foliáceo, verde, alampi- ñado, ancho de 5" -6'" y doblado hacia afuera : cionosicys, F. 141, T. 11, G. YI. 191. Vejetales herbáceos, anuales, de tallos mas ó menos largos, ramos/timos, delgados, estriados ó cilindricos, ásperos j pelieriza- dos, rastreros, con hojas simples, alternas, largamente pecioladas, mas ó menos profundamente lobuladas j á veces hasta profunda- mente partidas, de lóbulos enteros ó aserrados; zarcillos simples; estambres con 3 filamentos distintos, de anteras conniventes, dis- tantes ó lijeramente reunidas, escedidas por les lóbulos del conec- tivo j cujas celdillas son inclinadas por arriba v por abajo : cucumis, P. 141, t. II, G. III. 192. Corola nunca enrodada, 5-partidaó 5-fida; estambres cuyas anteras no son connatas en una columna cilindrica; ovario contraído por debajo del limbo calizinal y cuyas celdas contienen algunos óvu- los, 193. — Corola siempre enrodada, cuyas divisiones simulan pé- talos distintos; todas las anteras están adheridas en una columna cilindrica, cuyas celdillas están dobladas por arriba y por abajo; celdas del ovario con 2 óvulos solamente. Plantas herbáceas de tallo delgado, largo, ramosísimo, trepador, áspero y anguloso, pubescen- tes, alampiñadas ó lampiñas, con hojas largamente pecioladas, sim- ples, alternas, 3, 5-lobuladas, mas ó menos acorazonadas por la base, de lóbulos enteros, sinuoso-sub-enteros ó dentaditos. Flores en ra- cimos axilares ó solitarios; ovario 3-locular recojido por debajo del limbo calizinal; baya oligosperma : cionandra, F. 141, T. II, G. I. 193. Corola 5-partida; estambres insertos en el tubo calizinal, con 3 anteras subsesiles y oblongas, cuyas celdas derechitas están situadas sobre las márjenes de un conectivo entero; fruto ovoideo pequeño y purpúreo, 193 Ms. — Corola 5-fida con los lóbulos indu- plicados en la estivacion, campanuda y adherida con la parte infe- rior del tubo calizinal; estambres 5, insertos en la base de la corola, triadelfos, conniventes, en columna, con anteras uniloculares, de celdas lineares, conectivo apellas engrosado, adheridos por el dorso y con muchas anfractuosidades lonjitudinales. Fruto á veces muy grueso, de forma, tamaño y color muy variados. Plantas herbáceas anuales, de tallos larguísimos, rastreros y muy ramosos, con zarci- llos, de hojas simples, alternas, pecioladas, acorazonadas, enteras ó 3, 5-lobuladas, mas ó menos pelitiesas, de peciolo largo, cilindri- co y hueco ; pedúnculos axilares, con una sola flor amarilla, de cáliz con tubo corto, campanudo y 5-fido en las masculinas, mientras que en las femeninas tiene el tubo aovado ú oblongo, con el ovario ad- herido, el limbo 5-fido ; la corola es conforme con la de las mascu- linas ; hay estambres estériles con frecuencia ; ovario infero 3, 5- locular, con las placentas parietales multi-ovuladas y situadas de cada lado de los tabiques; 3 estigmas engrosados y bilobulados. Peponida 3, 5-locular, con muchas semillas aovado-comprimidas, ceñidas por una márjen túmida ; cotiledones foliáceos; endospermo nulo; raicilla cortísima y centrífuga: cuciíriita, F. 141, T. II, G. XI. VEJETALES FANERÓGAMOS MONOICOS. 205 193 bis. Plantas herbáceas trepadoras, de tallo delgado, largo j mu j ramoso, alampifiadas, con hojas membranosas, acorazonadas, con un seno profundo y abierto, puntiagudas, sinuoso-repandas ó 3, 5-lobuladas, anchas de l"-2", lijeramente ásperas, con pintas blancas ó alampifiadas j pecioladas; zarcillos simples; flores mas- culinas en racimos pequeños ; tubo del cáliz tan largo como la coro- la, dientes diminutos; segmentos de la corola escotados en las flores masculinas y enteros en las femeninas, todas amarillas j anchas de 2"'-3'"; semillas pubescentes : melotkria, F. 141, T. II, G. VIL 194. Flores monoicas, andrójinas ó dioicas; fruto aqueniforme; plantas herbáceas ó fruticosas, 195. — Flores monoicas ó polígamas, pero ni andrójinas ni dioicas tampoco; fruto capsular ó utricular; plantas herbáceas siempre lampiñas y á veces espinosas, 197. 195. Segmentos del cáliz de las flores femeninas ordinariamente en número de 3; estigma apincelado ; hojas opuestas, 196. — Cáliz de las flores femeninas contraído por el ápice 2, 4-dentado ó entero: á veces suele faltar; frútices ó arbustillos de hojas simples, opues- tas ordinariamente, pero á veces alternas, largamente pecioladas^ aovadas, oblongas ó mas ó menos lanceoladas y bastante grandes, con estípulas axilares; flores en grupos axilares ó formando espi- guitas interrumpidas y amentiformes, sin involucro, cuyas mascu- linas constan de un cáliz 4, 3, 5-partido, conteniendo 3, 4 estam- bres ; las femeninas se componen de un cáliz 2, 4-dentado conteniendo un estigma filiforme persistente, peludo por uno de sus lados nada mas : dcelimeria, F. 39, T. I, G. IV. 196. Plantas herbáceas, lampiñas, pubescentes ó velludas, de ta- maño muy variado, mas ó menos ramosas, de tallo carnoso ó her- báceo, desparramado ó recto, de hojas opuestas, desiguales en cada par, de manera que la una es casi siempre mas grande que la otra, ordinariamente provistas de rafidias, nervosas, de forma, tamaño y consistencia muy variados, enteras ó aserradas, lampiñas ó pubes- centes y velludas, pecioladas, con estípulas axilares. Flores en ci- mas axilares mas ó menos pedunculadas, cuyas masculinas constan de un periantio 4, 2-partido, conteniendo 4 estambres, mientras las femeninas se componen de un periantio 3, 2, 4-partido, con uno de los segmentos mayor y giboso por debajo del ápice; ovario único, unilocular, monospermo : pilea; F. 39, T. III, G. I. 197. Flores siempre monoicas; estambres 3, 2, 5; estilos 2, 3; fruto utricular, 198. — .Flores polígamas ó monoicas; estambres 5, 3; fruto capsular circoncisible ó pixidio, que á veces se revienta irregularmente por la base ; plantas herbáceas anuales, lampiñas ó pubescentes, de hojas simples, alternas, pecioladas y á veces decur- rentes, enteras, romboideas, mas ó menos oblongas, lanceoladas 6 aovadas, con estípulas espinosas ; flores ordinariamente en espigas axilares ó terminales, mas ó menos elongadas y cuya reunión forma racimos ó panojas terminales mas ó menos largas; tales flores están acompañadas cada una de su bráctea aquilada y persistente, de un cáliz con 5, 3 segmentos iguales, derechos, lampiños y persistentes; filamentos de los estambres subulados con anteras biloculare» y 206 MÉTODO DICOTÓMICO. oblongas; en las femeninas hay un ovario ovoideo, unilocular, mo- nospermo, corona,clo por 2, 3 estigmas sésiles, filiformes, alesnados y ancliitos. El.fruto consiste en un pixidio oval y cuyo vértice tiene 2 ó 3 piquitos, imperfectamente envuelto por el periantio á veces membranoso; semilla única vertical, lenticular y arriñonadita, de testa crustácea, con endospermo central farináceo, embrión cíclico y periférico, de radícula infera : amarantics, F. 55, T. III, G. II. 198. Flores ordinariamente monoicas; estambres 3, 2, 5; estilos 3, 199. — Flores siempre monoicas; estambres 3 siempre; estilos 2, 3; planta herbácea cespitosa anual, alampiñada, de hojas alter- nas, espatuladas, retusas, arrejonadas, enteras; flores verdoso- blanquecinas, pequeñas, dispuestas en grupos axilares, cuyas mas- culinas tienen el periantio de 3 sépalos, los estambres distintos con las anteras bilocuiares; en las femeninas al contrario está 5-fido, de tubo urceolado , sosteniendo un limbo de segmentos espatulado- lineares, obtusos y trinervios : amMogyne, F. 55, T. III, 199. Plantas herbáceas anuales, de tallo recto, ramoso y mas ó menos alto, según la feracidad del terreno en que se crian, altas de l'-2'-3', con hojas simples, alternas, mas ó menos grandes, peciola- das, mas ó menos aovadas y remalladas, enteras y lampiñas. Flores en grupos axilares ó dispuestas en espigas terminales, pequeñas y verduscas, siempre acompañadas de brácteas mas ó menos largas y formadas de un periantio con 3, 5 sépalos ; ovario ovoideo ó redon- do, unilocular, monospermo : euxohis, F. 55, T. III, G. I. 200. VEJETALES DIOICOS, 201. 201. Arboles ó arbustos, 202. — Plantas herbáceas, fruticulosas ó frútices, 231. 202. Cuyo tronco es un astil ó estipe, 203. — De tronco lejíti- mo, 206. 203. Estipe lejítimo mas ó menos alto y con hojas compuestas; fruto drupáceo monospermo, 204 Ms. — Seudo-estipe ó tallo esti- piforme, de poca dureza y fuerza, lechoso y con hojas simples; fruto carnudo polispermo, 304. 204. Vejetales que á primera vista parecen casi palmeras, porque su tronco es desnudo, cilíndiñco, con muchas cicatrices algo triangu- lares, de color ceniciento, sin ramos y coronado por hojas como ellas, del tamaño como del muslo de un hombre, y alto de 15' á 25'; hojas simples, palmatinervias, largamente pecioladas, alternas ó esparci- das, de limbo grande, palmatífido ó profundamente 7 ó 5-lobulado, con los segmentos pinatífidos ó enteros, lampiñas, sin estípulas. Flores masculinas en corimbos simples ó apanojados, axilares y de cáliz nionosépalo diminutamente dentadito ; corola infundibulifor- me, mucho mayor que el cáliz, cuyo tubo cilindrico y delgado sos- tiene un limbo dividido en 5 lacinias imbricadas, con el ápice arro- llado por fuera, conteniendo 10 estambres dispuestos en dos series é insertos en la parte superior de la garganta, de los cuales 5 senta; dos son opuestos á sus divisiones, mientras los otros 5 alternos, tie- nen filamentos blancos, peludos y algo espesos inferiormente- anteras bilocuiares, linear-oblongas y estriadas: en el centro está el rudimento del pistilo; las femeninas al contrario en racimitos axi- VEJETALES FANEEÓGAMOS DIOICOS. 207 lares formados de 3 á 5 flores sentadas sobre un pedúnculo común grueso y corto, algunas veces solitarias,. con el cáliz conforme al de las masculinas ; corola mucho mayor, amarillenta también, 5-par- tida y cuyos segmentos parecen pétalos oblongos , algo estendidos y doblados hacia fuera, campanuda; ovario ovoideo, ancho, oblongo, verdusco, unilocular, con 5 placentas parietales cargando con mu- chos óvulos, de cuyo ápice sale un estilo cortísimo con 3 ó 5 estig- mas dispuestos á manera de radios de rueda, franjeados y de color amarillo verdoso. Se hallan algunas flores hermafroditas entremez- cladas con las masculinas especialmente, pero son casi siempre es- tériles. Fruto bacciforme mas ó menos grueso, amarillo subido, obovoídeo mas ó menos, largo de 4^" á 8" y 10'', aovado, con una punta j largo de 3" ó globoso y del tamaño de una nuez. Las mu- chas semillas dispuestas por series verticales son ovoideas, pequeñas y envueltas en una membrana diáfana, conteniendo un líquido como mucilajinoso, y dentro está la semilla, negra, áspera ó asurcadita : carica, F. 143. 204 Ms. Drupa carnosa, cuyo hueso parece un grano de trigo gruesísimo; frondas pinadas; espata leñosa simple; estambres 6, 3, de filamentos cortísimos, con anteras lineares; flores nunca políga- mas, 205. — Drupa redonda apenas carnosa, cubierta de una con- cha dispuesta á manera de coraza y formada de muchas escamas leñosas, color castaño y lustrosa; espata común nula, pero muchas parciales incompletas; espádice ramoso con divisiones amentíferas; estambres 6; flores polígamo-dioicas; frondas grandes flabelifor- mes : primorosa palmera mas ó menos alta, cuyo estipe desnudo ó armado de aguijones, bastante grueso y cilindrico, contiene una médula feculenta; frondas, largamente pecioladas y derechas , de limbo en forma de abanico multífido; flores en espádices dística- mente ramosos, situadas entre las escamas ó brácteas escamosas de los amentos, cuvas masculinas son formadas de un neriantio con 2 series, cu^^a esterior es con 3 piezas sueltas, lineares y derechas ; filamentos de los estambres llanitos, con anteras lineares erguidas; en las hermafroditas, el periantio es campanudo, tridentado ó trífido esteriormente, mientras la serie interior es 3-partida, con lacinias lanceoladas y derechas; 6 estambres dispuestos á manera de pirá- mide central, de anteras ovales y sub-bilobuladas por la base ; ova- rio globosito, 3-locular, cuyo vértice lleva un estigma sentado y tri- lobulado. Drupa globosa monosperma, conteniendo una pulpa espesa de como 1"\ situada entre la concha esteriormente formada de mu- chas piececitas desigualmente cuadrangulares , cuyo ángulo mas agudo mira hacia la base y el mas obtuso hacia el vértice, algo mas anchas que largas, imbricadas por los lados que salen del ángulo agudo ó inferior, algo membranosas y como franjeadas por esos bor- des, presentan además un surco lonjitudinal que va de la base hasta el vértice, pasa por la parte mediana y las divide en dos partes igua- les, y una capa esponjosa interiormente, blanca, espesa de como 1'"- 2"', á la cual adhiere, y que contiene el hueso redondito, lustroso, prieto y con una puntita doblada ; endospermo cartilajinoso y olea- ginoso : maiiritia, F. 14, T. I. 208 MÉTODO DICOTÓMICO. 205. Grandes j hermosas palmeras cujo estipe conserva pegada durante algún tiempo la base de las frondas ya caldas, j después liso ; frondas grandes, largas como de 1' á 9', pinadas j derechas. Flores en panojas ó támaras axilares contenidas en una espata leño- sa y monófila, cuyas masculinas de periantio dohle, con 6 divisiones de las cuales 3 son esteriores y mas largas y 3 mas interiores, con tantos estambres, conforme en las femeninas que contienen 3 ova- rios, de los cuales 2 abortan casi siempre, terminados por un estig- ma sésil y torcido, uniloculares monospermos ; las támaras cargan con muchísimos frutos del tamaño del dedo pulgar, ovoídeo-oblon- gos y de color amarillo oscuro cuando maduros, pero no todavía pa- sas :phce/iix, F. 14, T. II. 206. Flores nunca dispuestas en espádices , 207. — Flores siem- pre dispuestas en espádice; árboles de aspecto particular y caracte- rístico, bastante altos y no muy ramosos, de tallo cilindrico desnu- do, marcado de semi-anillos, con las hojas pareciendo casi las de pina y agrupadas hacia el vértice de los ramos, poco numerosas, alternas y casi en espiral, lanceoladas, verdes, rosadas ó amarillen- tas, puntiagudas, acanaladas, sentadas, algo envainadoras por la base, abiertas y de bordes espinosos. Flores en espádices amentifor- mes amarillos saliendo del centro de las hojas, cuyas masculinas consisten en una antera única cuspidada y situada en la axila de una bráctea; en las femeninas el ovario está dispuesto del mismo modo y se termina por un estilo bífido. El fruto es una especie de drupa : pandamís, F. 13. 207. Desnudas ó sin envoltura floral, 208. — Nunca desnudas y siempre provistas de una cubierta floral , sea simple sea doble, 215. 208. Vcjetales lechosos, las mas veces monoicos, cuyas flores masculinas, formadas por un estambre acompañado de una bráctea abroquelada, cubren toda la superficie de un receptáculo globoso, 114. — Yeietales nunca jamás lechosos; flores en amentos; estam- bres 4, 2, 209. 209. Flores sésiles sobre la superficie de un receptáculo ramoso y cilindrico ; tronco y ramos huecos y con tabiques trasversales, 212. — Flores nunca jamás situadas sobre un receptáculo; tronco y ramos nunca huecos, 213. 210. Vejetales con hojas siempre, 212. — Yejetales sin hojas, 211. 211. Flores amentáceas provistas de un involucro, un solo estam- bre escrecente; ovario unilocular, con un óvulo pendiente ; estigma "bipartido : árbol muy alto, de tronco derecho, liso, color ceniciento, ramoso, sin hojas, cuyas ramitas filiformes son estriadas, simples, con 6, 8 surcos, cuyos nuditos están envueltos en una vainita foliá- cea pluridentada. Flores masculinas en amentos terminales, clavi- formes y lineares, amarillentos, muy pequeños; flores femeninas en amentos laterales cortamente pedunculados, y por fin cilíndrico- ovoídeos; el fruto consiste en una especie de estróbilo ovoideo de como 1" de largo, conteniendo una cariópside lenticular, de semilla inversa, con el embrión sin endospermo y ortótropo, de raicilla cor- tísima y supera : casuarina, F. 44, T. II. VEJETALES FANERÓGAMOS DIOICOS. 200 212. Flores nunca jamás situadas en la superficie de un receptá- culo cualquiera, pero sí amentáceas, tronco y ramos nunca huecos, 213. — Flores sésiles j situadas en la superficie de un receptáculo ramoso y cilindrico, tronco y ramos huecos j cuyo canal cen- tral está dividido por tabiques membranoso -transversales : ár- boles ramosos superiormente y de ramos poco numerosos, apartados y estendidos, altos de como 45'-50' de tronco derecho no muy grue- so y color ceniciento; hojas bastante grandes, largamente peciola- das, alternas, simples, abro([uelado-redondeaditas, ordinariamente palmeado-lobuladas, con 1, \), 11 lóbulos mas (') menos profundos, sub-enteros, obovado-oblongos y obtusos, ó aovados y puntiagudos, de cara superior verde oscuro y lampiña ó alampiñada y áspera, mientras la inferior tomentosa y blanca, es suave : cuando tiernas son bastantes veces teñidas de morado ó hasta moraduscas , anchas de 12-14-116" y largas de 12 á 15", con el peciolo de 8-10-12", cuya base está acompañada de dos estípulas pequeñas, escamosas y pron- to caducas; pedúnculos axilares largos de 2-4-6", de cuyo ápice sa- len muchos receptáculos dispuestos en especie de umbela, cortamente estipitados, larij^os de 1 1|2" sobre 1"' de diámetro, envueltos todos en una bráctea común espatiforme antes de la florescencia y pronto decidua , cuyas flores constan de un periantio tubular anguloso, que parece formado de unas escamas turbinadas, soldadas entre sí, algo tetrágono, con dos poros por el ápice, por donde salen dos estambres, mientras que los femeninos, nms espesos, sésiles en el vértice del pedúnculo en número 4 ó 2, son largos de 2" sobre 3"' de diámetro y llevan llores que se componen de un periantio ó involu- cro bífido, conteniendo un ovario monospermo, de cuyo ápice sale un estigma apincelado. Baya, monosperma, sentada en el receptá- culo : cecropia, F. 39, T. Y, (r. I Y. 213. Estambres siempre 4; fruto drupáceo pequeño, cubierto de cera; vejetales aronuiticos, 214. — Estambres 2 solamente; fruto capsular con semillas peludas; vejetales nunca aromáticos : árboles mas ó menos altos y muy ramosos, ó arbustos con hojas simples^ alternas, muy cortamente pecioladas, lanceoladas, coriáceas, lus- trosas, enteras ó aserradas, acompañadas de estípulas persistentes ó escamosas y deciduas; flores en amentos saliendo ordinariamente antes que las hojas, otras veces después de ellas, y entonces son axilares, cuyos masculinos con escamas enteras en la axila de las cuales se halla un disco í^ianduloso, de donde salen los estambres de filamentos libres ó reunidos por la base ; los femeninos se diferen- cian de los primeros solamente por tener en lugar de los estambres un ovario unilocular ovoideo que se termina por un estilo cortísimo con dos estigmas bilobulados; muchos c3vulos, parietales y situados hacia la base de la celda. Cápsula unilocular abriéndose en dos val- vas, cuva base carua con muchas semillas derechas v cabelludas ; saJúr, F. 43. 214. Arbustos ó árboles bajitos que se elevan á loó 25' de altura, ramosos, resinosos y aromáticos y produciendo cera, de hojas sim- ples alternas, cortamente pecioladas, enteras ó sub-enteras, ó aser- radas por arriba de su parte mediana, espatuladas ó lanceoladas, de TOMO f 14 210 MÉTODO DICOTÓMICO. cara superior pubescentita ó alampiñada, las nervaduras de la infe- rior solas son pubescentitas, provistas de puntitos resinosos trans- parentes; amentos tardíos, sub- solitarios y axilares, cuyos mascu- linos cortamente cilindricos, con brácteas cuneiformes; estambres 4, 5, cuyos filamentos reunidos por la parte mediana forman una co- lumna filiforme y peluda con anteras verticales largas , biloculares ybilobuladas; los femeninos, también axilares, ovoideos, son forma- dos de brácteas caducas, ovalagudas ; ovario oval algo achatadito por el vértice, de cuyo ápice salen dos estigmas sentados filiformes, estendidos y mas largos que las brácteas. Fruto drupáceo, unilocu- lar, ovoideo, pequeño y largo de 1'", monospermo, cuya cascara verde está cubierta de muchos tuberculitos moraduscos que parecen como granitos de pólvora, reunidos entre sí ó envueltos por una capa mas ó menos espesita de cera mas ó menos blanca ; el Imesecito contiene una semilla prieta y algo elongada ; myrica, F. 44. T. I. 215. Fruto drupáceo ó no drupáceo, cuyo hueso cuando drupáceo no está nunca cubierto por un arilo ; estambres nunca monadelfos tampoco, 216. — Fruto drupáceo dehiscente, pareciendo casi un al- baricoque de Europa, cuyo hueso ovoideo y de casco lustroso y par- do está cubierto por un arilo ramoso color rojizo ó anaranjado mora- dusco; estambres monadelfos. Arboles mas ó menos grandes, muy ramosos, que se elevan á 25' y 60' de altura, de hojas simples, pe- cicladas, alternas, enteras, elíptico-oblongas ó linear-oblongas, alampiñadas, mas ó menos cuspidadas, de cara inferior con las ner- vaduras dispuestas por pares en número variable de 8 á 30, sin es- típulas. Flores axilares cuyas masculinas, fasciculadas ó arracima- das, pediceladas y acompañadas de una bráctea mas ó menos grande situada por el vértice de los pedicelos y decidua, constan de un pe- riantio ovoideo ó infundibuliforme, 3-fido, valvar, conteniendo 3, 9, 12 anteras estrorsas adheridas en tubo monadelfo, linear-oblon- gas, con dos celdillas que se abren lonjitudinalmente; mxientras las femeninas, casi siempre solitarias, pediceladas, difieren de las otras solamente por tener un ovario único, unilocular, con un solo óvulo erguido, y de cuyo ápice salen dos estilos cortísimos con estigma cabezudito. El casco crustáceo, lustroso y poco espeso del hueso contenido en la drupa, encierra una semilla formada de un endos- permo voluminoso, bastante duro, de corte jaspeado, oleajinoso y aromático á la par, con el embrión alojado por la base : myristica, F. 94. 216. Flores provistas de una envoltura floral simple ó con un pe- riantio, 217. — Flores cuya cubierta floral doble se compone de un cáliz y de una corola, 229. 217. Periantio asalvillado, con involucro pequeño, conteniendo 4 escamas hipójinas; 8 anteras subsesiles; fruto abayado, 218. — Pe- riantio nunca asalvillado ni involucrado por la base tampoco, sin escamas hipójinas; fruto ordinariamente drupáceo ó abayado, 219. 218. Arbustos ó arbolitos ramosos, cuyas ramitas pubescentes ó lampiñas llevan hojas simples, alternas, enteras, coriáceas ó sub- coriáceas, elíptico-lanceoladas ó elípticas, discolores ó concolores, enteramente lampiñas ó cuya superior es lampiña, mientras la in- VFJETALES FANERÓGAMOS DIOICOS. 211 ferior es blanquecino-pubescente, largas de 4"-3" y anchas de 18'" 8'". Flores dispuestas en cabezas ó en umbelas, con pedúnculos sim- ples, di ó tricótomos, pediceladas ó sentadas, mas ó menos sedosas; las masculinas constan de un cáliz monosépalo asalvillado, cuyo tubo delgado, 2 ó 3 veces mas largo que el limbo 4-partido, sostenido por un involucro diminuto y dentadito, tiene en su fondo un pistilo rudimentario, 4 escamas bipójinas, y 8 estambres subsesiles; en las femeninas el periantio es infundibuliforme ó campanudo, con sus 4 lóbulos obtusitos y encorvados, contiene un ovario ovoideo unilocu- lar, ordinariamente con un óvulo, lateralmente inserto, de cuyo ápi- ce sale un estigma terminal y subsesil : daph'/i02)sis, F. 49, G. II. 219. Estambres nunca dispuestos por series, de anteras que no se abren nunca por poros, fruto abayado y sorosiforme ó drupáceo, 219 Ms. — Estambres dispuestos en 2, 3 ó mas series, y en número variable de 9, 12, 15, 18, de las cuales algunas suelen abortar, cuyas anteras de 2, 4 celdas se abren siempre por medio de poros cuyas ventallas se levantan de abajo por arriba. Fruto abayado ó drupá- ceo, pero sin hueso y sí con una pepita, 222. 219 bü. Estambres 4 ó 6; fruto abayado ó sorosiforme, 220. — Es- tambres 2, 3, 5 insertos en un disco anular; fruto drupáceo. Arboli- tos ó frútices de hojas simples, alternas, cortamente pecioladas, coriáceas, entejérrimas ó anguloso-dentadas, con estípulas caducas. Flores axilares, espigado-amentáceas; perigonio 3, 5-partido en ambos sexos; en las masculinas los filamentos de los estambres son filiformes y con anteras biloculares, cuyas celdas son divaricado- abiertas : hay un ovario rudimentario En las femeninas el disco anular ciñe á la base del ovario aovado, libre y unilocular, con dos óvulos colgantes del ápice de la celda, colaterales y anátropos; es- tigma sentado y 3, 5-radíado. Drupa monosperma, coronada por el estigma, cuyo hueso es espinosito interiormente, conteniendo una semilla pendiente, de endospermo espeso, carnoso y hoyoso; em- brión ortótropo, axil, con cotiledones grandes y foliáceos y raicilla corta y supera : antidesma, F. 38. 220.*^ Estambres 4; fruto abayado ó sorosiforme; árboles ó arbustos nunca jamás trepadores, sarmentosos ni zarcillosos tampoco, 220 his. — Estambres 6; fruto abayado pisiforme; vejetales abejucados sar- mentosos y provistos de dos zarcillos acompañando á la inserción del peciolo ; un rizoma con bastante frecuencia, 236. 220 Us. Flores masculinas y femeninas en espigas axilares y pe- dunculadasy nunca jamás colocadas sobre un receptáculo, 221. — Flores masculinas espigadas ó racemosas, sin receptáculo alguno, mientras las femeninas están agrupadas sobre un receptáculo glo- boso. Fruto compuesto de drupitas reunidas entre sí y formando así una especie de sorosis. Arboles bastante grandes, lechositos, corpu- lentos y coposos, con ó sin espinas axilares; de hojas simples, alter- nas, pecioladas, sub-enteras ó aserradas, oblongas y aguzadas ó aovado-oblongas con una punta, de base sub-truncada, redondeada ósub-acorazonada, alampiñadas ó pubescentes ó solamente en las nervaduras de la cara inferior ; flores masculinas en espigas cilin- dricas, amenti formes y formadas de un periantio 4-partido, lijera- 212 MÉTODO DICOTÓMICO. mente imbricado, conteniendo 4 estambres esertos , mientras las femeninas son en cabezas mas ó menos globosas, con el periantio de 5 segmentos que por fin se vuelven sólidos y duros por el ápice con- nivente; ovario libre, unilocular, con un solo óvulo pendiente y campilótropo, de cuyo ájñce sale un estilo simple, filiforme, eser'to, tan ó mas largo que el diámetro de la cabezuela y estigmatífero in- teriormente. Fruto sorosiforme, formado de muchos aquenios cu- briendo un receptáculo globoso y algo carnudo: luacliira, F.41, G. I. 221. Arbolito de ramos alampiñados, de hojas simples, alternas, oval-oblongas ú oblongas, con una punta, bien enteras y lampiñas, redondeadas por la base, con las nervaduras 6, 8-yugadas y arquea- das, pecioladas y largas de 8-4" sobre 3-2 li2-2" de ancho, de pe- ciolo corto, o á 6'" solamente; flores masculinas en espigas cilindri- cas amentiformes, pubescentitas y de ordinario mellizas, constando de un periantio 4-fido, valvar y conteniendo 4 estambres esertos, inclinados en el capullo y saliendo de él con elasticidad, mientras las femeninas, mas cortas, tienen solamente 4'" de largo y se compo- nen de 4, 8 flores cuyo periantio tubular es contraído hacia el limbo 4-dentado v contiene un ovario adherido unilocular, con un óvulo pendiente y campilótropo, de cuyo ápice sale un estilo 2-partido. Baya monosperma, larga de 4'"-6"', de semilla globosa y colgante, cuyo embrión no tiene endospermo : tmpMs, F. 39, T. I, G. II. 222. Flores siempre dioicas; 9 estambres de anteras 4-loculares; flores femeninas con 9 estambres estériles, 223. — Flores tan pronto dioicas como polígamas y hasta á veces polígamas, 224. 223. Arboles pequeños y frondosos, cuyas flores salen antes que las hojas, que son sencillas, alternas, membranosas, de forma 3" ta- maño variados, de manera que las unas son enteras y las otras tri- lobadas á veces de un solo lado, pubescentes, pecioladas y caducas. Flores amarillentas en corimbos opuestos á las hojas, lampiños ó pubescentes y con brácteas subuladas y caducas, constando de un periantio 6-partido, con segmentos membranosos, iguales y cuya base sola persiste; estambres dispuestos en 3 series; las flores feme- ninas difieren de las masculinas solamente por tener un pistilo for- mado de un ovario unilocular, uniovulado, terminado por un estig- ma asentado y cabezudo, rodeado por 3 series de filamentos estériles. Drupa suculenta, azulada, pisi forme, engastada en la base persis- tente y algo crecida del periantio y situada en el ápice crecido, como carnoso y colorado del pedúnculo, claviforme : sassafras, F. 46, T. X. 224. Dioicas ó polígamas y hermafroditas á la par, 225. — Dioi- cas ó las mas veces hermafroditas : arboles bastante grandes, ramo- sos, frondosos y que se elevan á 40' ó 50' de altura, con hojas sim- ples, alternas, largamente pecioladas, coriáceas, enteras, de cara superior lampiña y lustrosa, mientras la inferior, mas pálida, pu- bescentita ó alampiñada, tiene las nervaduras proeminentes 4, 5 ó 4, 6-yugadas y arqueadas, no aromáticas. Flores fasciculado-apanoja- das, cuyos pedicelos son mas cortos que ellas, con periantio 6-par- tido, cuyos segmentos son casi iguales á los 3 esteriores, pequeñitos VEJETALES FAXEliÓGAMOS DIOICOS. 213 T tres veces mas cortos que los interiores, y por ñn enteramente deciduo; estambres fértiles 9, 12. Baya mas ó menos gruesa de for- ma y tamaño muy variados, tan pronto oval y redondeada como piriforme, desnuda, lustrosa, verde, mas ó menos amarillenta ó moradusca, áspera ó lampiña, de carne amarillo pálido y comesti- Ijle; semilla globosa enteramente libre en el centro : persea, F. 46, T. VII. 225. Arboles ordinariamente bastante grandes, y á veces muy altos, corpulentos y coposos, siempre verdes y de hojas alternas, pecioladas, enteras, papiráceas, lustrosas, lampiñas y con las ner- vaduras arqueado- reticuladas. Flores densamente arracimado- apanojadas, terminales, á veces en tirsos y hasta casi en umbelas y formadas de un periantio 6-ñdo, cuyo tubo turbinado. lleva un limbo deciduo; en las femeninas hay estambres mas ó menos desarrolla- dos y á veces enteramente abortados, y las masculinas tienen con bastante frecuencia un pistilo en igual estado; estambres 9, 12 dis- puestos en 3 ó 4 series, de los cuales 9 estoriores son fértiles y bi- glandnlosos por la base algunos, con anteras de celdillas sobrepues- tas, dispuestas por pares, oblongas é introrsas las de la 1^ y 2^ serie, mientras las de la 3' son estrorsas; los 3 estambres anteriores ó formando la 4=» serie son estériles ó enteramente aljortados; ovario unil ocular, uniovulado, de cuyo ápice sale un estilo corto, termi- nado por un estigma discoideo ó deprimido mas ó menos caliezudo. Drupa abayada monosperma, acompañada por el tubo calizinal que se ha vuelto una especie de cúpula, mas ó menos espesa y carnosita por el pedúnculo que se ha engrosado : ocotea, Aubl., oreodaphne, Nees., F.46, T. XII, G. I. 226. Fruto drupáceo ó abayado, no proviniendo nunca de un ova- rio ginobásico, 227. — Fruto drupáceo ó capsular proviniendo siem- pre de un ovario ginobásico y formado á lo menos de 4 carpelos mas ó menos separados, 229. 227. Fruto drupáceo y casi seco, siempre unilocular; cáliz 5-par- tido ó 5-lobulado; corola con 5 pétalos insertos por debajo del disco; r, estambres; 3 estilos, 228. — Fruto abayado proviniendo de un ovario con 2, 3 celdillas conteniendo 2 óvulos; cáliz 3, 5-ñdo; corola con 3, 5 pétalos y á veces nula ; estambres 3, 5 opuestos á los péta- los é insertos también por debajo del disco; estigmas 2, 3 subsesi- les. Arboles pequeños ó arbustos, de hojas alternas imparipinadas, con 5-9, 5-7 ó 7-9 hojuelas elípticas ú oblongas, entejérrimas, mas ó menos papiráceas y lustrosas, lampiñas ó alampiñadas, con las nervaduras bastante pronunciadas por la cara inferior á veces pu- bescentita. Flores en racimos mas ó menos largos y á veces como algo apanojados. Bayas pequeñas ordinariamente, coloradas ó prie- to-azuladas v lustrosas, con una sola semilla colaante : picranmia, F. 110, G. li. 228. Arbustos y árboles bajitos, de hojas alternas imparipinadas ó con 2, 3 ó 1 par de hojuelas ó de 3 en rama, oval-redondeaditas, escotadas ó redondeadas por e-1 ápice, bien enteras, largamente pe- cioladas y lampiñas, largas de 1"-1 1|2". Flores en panojas peque- ñas, las hermafroditas siendo en corimbos axilares; estigmas sub 214 MÉTODO DICOTÓMICO. sésiles; drupa ovoideo-oblonga y color de escarlata: rhus , F. 128. 229. Diez estambres saliendo cada uno de una escama hipojíniea; fruto bien ginobásico formado 5 drupitas , 230. — Cinco estam-' bres solamente; fruto apenas ginobásico formando de 5 ó 1 folículos pequeños ó cajitas dehiscentes: árboles mas ó menos altos, á veces bastante corpulentos y frondosos, ó arbustos inermes ó de ordinario armados con aguijones gruesos cónicos ó punzantes, de base coma esponjosa aunque fuerte en los troncos y ramos gruesos, mientras que los de las ramitas y peciolos no tienen nada de particular; hojas imparipinadas y formadas de 10, 5-9, 6-6, 2 pares de hojuelas ó de una sola hojuela, lanceolado-oblongas, lanceoladas, elípticas ú oblongas, bien enteras, aserraditas, festoneado-aserradas, festonea- das, subsesiles ó pecioladas, enteramente lampiñas, de cara superior lampiña, mientras la inferior es alampiñada ó pubescentita sola- mente por las nervaduras, provistas siempre de puntitos transparen« tes mas ó menos abundantes. Flores pequeñas en panojas densas, axilares ó terminales, pubescentes y lampiño-verrugosas, de cáliz corto, monosépalo, con 3, 4, 5 divisiones derechas, de corola que suele faltar algunas veces , con 5 pétalos iguales á los segmen- tos calizinales ó mas largos que ellos ; las masculinas tienen 5 , 6 estambres salientes, alternos, iguales con los pétalos, mas largos que ellos é insertos en rededor de la base del disco ginofórico, en cuyo centro están los rudimentos del pistilo abortado ; en las feme- ninas se observan á veces estambres muy cortos, representados por los filamentos, sin ó con anteras mas ó menos abortadas, y siempre un pistilo formado de 5 carpelos ú ovarios distintos ó coherentes por medio del eje, á veces hay uno solo, uniloculares y con dos óvu- los colaterales y colgantes, sentados sobre un disco globoso ó cilin- drico hipójino, mas ó menos desarrollado y que constituye así una especie de ginóforo poco pronunciado ; del ápice salen tantos estig- mas conniventes ó coherentes. El fruto consiste en 5, 1 folículos, cuyo endocarpio es adherente á las valvas ó se separa por las már- jenes uniloculares, abriéndose por dos valvas, sentados ó algo esti- pitados, largos de 3'""2'" sobre 1 1^2 de diámetro, conteniendo 1, 2 semillas negras, esféricas, mas ó menos lustrosas, de embrión de- recho ó encorvado : z anillo xylum , F. 114, G. II. 230. Arboles mas ó menos altos que alcanzan á veces hasta 50' de altura, mas ó menos corpulentos y frondosos; hojas alternas, com- puestas y pinadas sin impar y formadas de muchos pares de ho- juelas alternas, pecioladas, coriáceas, enteras, oblongas ó lanceo- lado-oblongas, espatulado-oblongas ó lanceoladas, obtusas ó con una puntita obtusita, de cara superior lustrosa y verde oscuro, mientras la inferior es á veces mas pálida y glauca, lampiñas y deciduas. Flores en panojas terminales formadas de cimas pequeñas y paucí- floras, mas cortas ó apenas tan largas como las hojas, de cáliz 5-fido y mucho mas corto que los pétalos, que son 5 y abiertos ; en las mas- culinas los estambres son inclusos, con anteras introrsas, bilocula- res, acorazonado-ovales y lonjitudinalmente dehiscentes; en las femeninas hay los rudimentos de las 10 escí\mas, y 5 ovarios situa- dos sobre un ginóforo corto, distintos, uniloculares y con un óvulo VEJETALES FA^^ERÓGAMOS DIOICOS. 215 Único; de los ápices sale un estilo continuo, cada cual con su cor- respondiente estigma. Fruto formado de carpidlos drupáceos en número de 5 ó menos, sentados, uniloculares, monospermos; em- brión sin endospermo j con los cotiledones semJ-oYoídeos : simarii- la, F. 110, G. I. 231. Flores nunca jamás desnudas ni en cono terminal tampoco ; siempre un tallo bien manifiesto j mas ó menos largo , 232 Ms. — Flores siempre desnudas, 231 Ms. 231 Ms. Nunca en cono ó amento ó estrobiliforme terminal, pero sí en amentos filiformes ó pequeños opuestos á las hojas; arbustos trepadores, 232. — En cono ó amento estrobiliforme terminal, cuyo tallo es una especie de estipe subterráneo ó rizoma perpendicular, ordinariamente largo de 1' á 1 1[2' sobro 3" á 4" de diámetro, es- camoso solamente por el vértice que se halla á la superficie del suelo V del cual salen 4 ó 5 frondas que les hacen parecer á primera vista palmeras jóvenes, largas de 2' á 3', derechas, cuyas hojuelas, articu- ladas por la base y sentadas, son alternas óá veces casi opuestas, lan- ceolado-aguzadas por ambos estremos, ó redondeadas por el vértice, cuneiformes por la base, enteras ó aserradas hacia el vértice, basiner- vias, caducas, como estriaditas, lampiñas y lustrosas, raquis inerme ó provisto de aguijones, quedándose desnudo bastante tiempo y con aspecto como de una varita ó espina larga, derecha, algo compri- mida, de cara interior llana, mientras la esterior es convexa. Flo- res masculinas en conos terminales simples ó ramosos, ó mejor al- gunos saliendo del mismo pedúnculo, largos de 2" á 3'' y bastante gruesos, formados de escamas truncado-abroqueladas, cuyas florí- feras estipitadas y de ápice engrosado y como abroquelado, sub- bilobulado, llevan por la cara inferior muchas anteras sentadas; los conos femeninos son mucho mas gruesos, mas cortos , de pedúnculo largo de como 3"-4'' y como estriado también, aterciopelado y color castaño, formado de escamas algo carnosas, prismáticas y de 6 ca- ras, dispuestas por series verticales y alternando las unas con las otras, de ápice aterciopelado-moradusco como el de las masculinas, algo estipitadas también, cargando con 2 ovarios desnudos volcados cabizbajos y dispuestos á manera de T, cuya base está vuelta hacia la circunferencia, mientras el ápice, terminado por un puntito negro con una boquita, es el estigma sentado, situado por la base de las escamas, que así como las masculinas se apartan un poco las unas de las otras en la estación de la fecundación y después se vuelven á cerrar, mientras las primeras se quedan abiertas. El fruto es una especie de drupa abayada, con poca carne colorada, del tamaño de una avellana pequeña, situada entre las escamas del cono y por debajo de ellas; semilla ovoídeo-sub-globosa de testa huesosa; em- brión inverso contenido en el eje de un endospermo carnoso : 'za- mia, F. 35. 232. De hojas simples, alternas, pecioladas, enteras, tri-multi- nervias ó costilludas, membranáceas ó coriáceas, lampiñas ó pubes- centes; amentos saliendo de los nudos, cuyos masculinos son delgados , los femeninos algo mas gruesos y los fructíferos como arracimados; flores sentadas, acompañadas las masculinas de brác- 216 ]\IÍ:T0DÜ DICOTÓMICO. teas oblongas sentadas é imbricadas; estambres 2, 5, de fila- mentos rollizos, con las anteras aovado-reniformes ; en las femeni- nas las brácteas son abroqueladas, sub- sentadas, persistentes, oblona'as ú orbiculares, frecuentemente hirsutas interiormente; ovario sentado, aovado, con 3, 5 estigmas sésiles, cortos, espesos é hispiditos superiormente. Bayas estrechadas por la base, con pedún- culo falso, sub-globosas, de pericarpio delgado, con la semilla sub- redonda, de tegumento coriáceo -membranáceo ó córneo; endos- permo harinoso: culela, Miq., F. 37. 232 Ms. Yejetales siempre parásitos; flores apétalas; inflorescen- cia en espigas filiformes axilares, articuladas, cuyas flores numero- sas están anidadas en escavaciones correspondientes situadas en el eje, cuyos artejos ó piezas son sostenidos por un involucro truncado y bífido ; periantio de limbo 3, 2, 4-partido, adherente en las feme- ninas , anteras 4 sentadas ; ovario infero ovoídeo-unilocular, con un estigma sentado y obtuso ; baya unilocular monosperma. Tallos muy ramosos, leñosos, de como l'-2' de largo algo mas ó menos, con ó sin hojas, de color verde mas ó menos amarillento, 233. — Yejeta- les nunca parásitos, 234 his. 233. Yejetales con hojas; anteras sentadas transversalmente bi- loculares, cuya celda se abre por un poro ó una grieta, 233 Ms. — Yejetales afíleos, pero sí escamosos; anteras sentadas por la parte media de las divisiones calizinales, uniloculares y transversalmente dehiscentes, 234. 233 lis. Tallos articulados y nudosos, de ramitas mas ó menos comprimidas, tetrágonas, sub-cilíndricas ó cilindricas, con hojas opuestas bastante dobles, coriáceas, enteras, cortamente pecioladas, de tamaño variado, anchas y largas de r'-2 li2" ó pequeñas y lar- gas de 6'" á2"', aovadas, ob-aovadas, espatuladas, oblongas, elípti- cas, linear-lanceoladas, mas ó menos obtusas por el ápice, mas ó menos aguzadas por la base ; las flores constan de un periantio cuyo limbo es ordinariamente 3-lobulado, v raras veces con 2 ó 4 lóbulos: anteras transversalmente biloculares y cuyas celdas se abren por un poro ó una grieta : pJtoradendron, F. 47, T. II, G. I. 234. Tallos dicótomos nudoso articulados , muy ramosos, largos de 6"-l'-2', con las ramitas estriado-cilíndricas, comprimidas y por fin mas ó menos cilindricas, mas ó menos quebradizas, sin hojas, que están reemplazadas por escamas mas ó menos trabadas y formando una vaina, ó reducidas á puntas ó apenas notables y mas ó menos deciduas; las flores constan de un periantio 3, 2-lobulado ó partido y raras veces con 4 segmentos ; en las masculinas está el rudimento del pistilo; anteras sentadas en la parte mediana de las divisiones calizinales, uniloculares y transversalmente dehiscentes : arceutho- lium, F. 47,T. II, G. II. 234 his. Matas de tallos mas ó menos larc'os v del^-ados, enreda- deros ó volubles, leñosos ó herbáceos, con ó sin zarcillos, con ó sin aguijones, 235. — Yejetales ni enredaderos ni volubles tampoco. 244. 235. Con zarcillos, 236. — Sin zarcillos, 239. 236. Plantas de tallos leñosos abejucados ó herbáceos, sin aguijo- VEJ EXALES FANERÓGAMOS DIOICOS. 217 nes; zarcillos solitarios estraxilares, simples ó ramosos; periantio siempre doble; ovario infero, 237. — Bejucos de tallos larguísimos, fortísimos, muy aguijonosos, con 2 zarcillos acompañando á la in- serción del peciolo; periantio único; ovario libre ó supero; vejeta- Íes perennes, cuyos tallos lampiños salen á veces de una especie de rizoma, sarmentosos y trepando por encima de los demás vejetales, en donde se sostienen con sus zarcillos muj- fuertes, de aguijones negj'os, cortos, ganchosos y muy fuertes ; hojas simples alternas, asaz largamente pecioladas, enteras, basinervias , de nervaduras sencillas y paralelas, mas ó menos ovales, de base acorazonada y de vértice mas ó menos puntiagudo, mas ó menos anchas, como mem- branosas, lampiñas, lustrosas y de un color verde oscuro. Flores en especies de umbelas axilares largamente pedunculadas, pequeñas y verdoso-amarillentas, cuyas masculinas constan de un periantio monosépalo, campanudo, con 5 segmentos casi iguales abiertos y es- tendidos; 6 estambres de anteras erguidas, biloculares; en las fe- meninas el periantio es persistente, marcescente y conforme al de las masculinas; ovario lil)re, mas ó menos globoso, con 3 celdillas monospermas y de cuyo ápice sale un estilo corto que se termina por 3 estigmas. Baya esférica, pisiforme, rojiza, lustrosa y con 3 celdas conteuiendo cada una una semilla redonda: á veces algunas suelen abortar : smilax, F. ]7. 237. Zarcillos estraxilares y simples; fruto abayado y carnudo; estambres diadelfos insertos por la base del tubo calizinal, 2 ante- ras subsesiles, oblongas, cuyas celdas son rectas y marjinales, 238. — Zarcillos axilares proviniendo de ramitas abortadas y simples ; fruto grueso, corticoso, con una especie de surco transversal y casi en la parte mediana por donde al caerse al suelo se abre á manera de los pixidios ó de jabonera ; estambres 5 centrales, alternando con 5 filamentos estériles, de anteras marjinales; vejetales semi-leño- sos, de tallos larguísimos y sarmentosos, muy ramosos y que se crian de ordinario en las cercanías ó en las orillas de las quebradas, con hojas grandes, alternas, simples, largamente pecioladas, algo coriáceas, sub-acorazonado-redondeaditas, angulosas, 3-5-lobuladas 6 enteras, lisas, de cara superior lustrosa, con ó sin glándulas y an- chas de 3"-4" y largas de 5" sin el peciolo, que lo es de 4 á 6" ; flo- res masculinas amarillentas fascieuladas y dispuestas en panojas, de cáliz monófilo 5-fido; corola enrodada ; las femeninas al contra- rio son solitarias con el cáliz adherente 5-lobulado ; corola cuyos 5 petalos son distintos y oblongos; 5 filamentos estériles alternan de ordinario con los pétalos ; ovario infero, globoso, con 3 celdas con- teniendo algunos óvulos, de cuyo ápice salen 3 estilos terminándose en un eí.tigma, espesito, obtuso y bífido. Fruto globoso, lampiño, de como 4"-6" de diámetro, con 3 celdillas en las cuales las semillas casi horizontales son pegadas del placenta central bastante grueso y triangular y aplicadas las unas por encima de las otras oblicua- mente, discoideas, achatadas, undulosas, de testa espesa bastante fuerte y de color gris sucio esteriormente, blanca y como corchosa interiormente, anchas de 1 l{2"-2" v espesas de como 6'" \femllea, F. 141, T. I. 218 MÉTODO DICOTÓMICO. 238. Plantas herbáceas cuyos tallos, largos, delgados, ramosos y alampiñados, salen de una raíz tuberculosa bastante gruesa, y tie- nen hojas simples, alternas pecioladas, con 5 lóbulos profundos y pedáleos, á veces son *7 ú 8, sub-enteros, cuyos tres medianos son oblongos y mucronados, mientras los esteriores son serai-aovados, acorazonadas por la base con un seno grande y anchas de 5"-6". Flores ordinariamente rojas, cuyas masculinas son en racimos cor- tos, con los pedúnculos tan largos como las hojas, pedicelos sin bráctea y del largo del cáliz monosépalo, 5-dentado, tubular-cam- panudo, de tubo verde mas largo que los pétalos, que son 5; tubo calizinal largo de '7-8'" ; dientecitos recorvos y largos de 5'"-6'" ; mientras las femeninas son solitarias y tienen un ovario con 2 cel- dillas conteniendo algunos óvulos : anguria, F. 141, T. II, G. IX. 239. Raiz siempre fibrosa; flores á veces provistas de una corola; ovario libre ó supero; embrión encerrado en un endospermo en forma de herradura ; hojas de nervaduras no paralelas simples pero anastomosadas entre sí; fruto drupáceo, 240. — Raiz siempre tube- rosa mas ó menos gruesa: flores sin corola siempre ; ovario infero ; embrión contenido en un endospermo nunca dispuesto á manera de herradura; hojas basinervias y de nervaduaas simples paralelas y no ramificadas ; fruto capsular, 242. 240. En ambos sexos cáliz con 6 sépalos dispuestos en 2 series, y corola de 6 pétalos; las masculinas contienen 6 estambres y las fe- meninas 3 ovarios, 241. — En las f.ores masculinas el cáliz es de 4 sépalos y la corola cupuliforme, sub-entera, con 4 estambres cuyas anteras se abren transversalmente; el cáliz de las femeninas es monófilo, como espatiforme, de ordinario escotado, sostenido por una bracteita ; pétalos nulos; ovario único con 3 estilos; vejetales sarmentosos, sin embargo algunas veces no lo son ó solo muy poco, sin duda por ser demasiado cortos los tallos pubescentes, velludos y hasta afelpados ; de hojas simples, alternas, pecioladas, acorazo- nado-redondeadas, cuyo peciolo es situado por la base ó como abro- queladas, lijeramente velluditas por ambas caras ó por la inferior solamente, pubescentes ó afelpadas por ambas caras, membranosas ó cartáceas ; flores masculinas muy pequeñas dispuestas en racimos compuestos ó corimbos axilares cuyos pedicelos son tricótomos ó simples, estambres monadelfos; mientras las femeninas son fascicu- ladas y dispuestas en racimos ó espigas y sostenidas por una brác- tea bastante grande. Drupa pequeña casi esférica, roja y envuelta en la base del cáliz, monosperma unilocular : cissami)elos, F. 93, T. II. 241. Vejetales sarmentosos ó bejucos de hojas mas ó menos co- riáceas, alternas simples, pecioladas, oblongas, elíptico-oblongas ó acorazonado-triangulares, lampiñas ó algo pubescentitas enteras, con las nervaduras bastante pronunciadas por la cara inferior. Flo- res dispuestas en racimos axilares á veces apanojados, delgados y mas largos que el peciolo; drupas comprimidas, cuya semilla está situada sobre un ápice discoideo y saliendo del pericarpio; endos- permo espeso y no ruminado, conteniendo el embrión anular, cilin- drico y casi tan largo como él : cocculus, F. 93, T. I. VEJETALES FANERÓGAMOS DIOICOS. 219 242. Ovario con 3 estilos ; fruto capsular de 3 celdillas con 2 se- millas aladas en cada una, 243. — Ovario con 5 estilos ; el fruto es una especie de sámara y por consiguiente unilocular y monospermo; tallos muy ramosos, delgados, larguísimos, enredaderos y herbá- ceos, saliendo de una raiz perpendicular carnosa no muy gruesa, con hojas simples, alternas, pecioladas, óvalo-lanceoladas, de base acorazonada y con una punta por el ápice. Flores en espigas axila- res en la sumidad de las ramitas formando así especies de guirnaldas apanojadas algo amarillentas; en las masculinas el periantio es de 6 divisiones iguales y abiertas, con 6 estambres cuyos filamentos son mas cortos que él y por consiguiente inclusos : rajania, F. 19. 243. Tallos anuales, semi-leñosos, largos, ramosos, no muy del- gados, volubles, mas ó menos alados, saliendo de una raiz tuberosa que se vuelve á veces muy gruesa y llega á pesar mas de una arroba, con hojas sencillas, alternas, pecioladas, enteras, á veces bastante grandes, membranosas, ovales ú oblongo-aovadas, acorazonadas por la base y aguzadas por el vértice, lampiñas y lustrosas. Flores pe- queñas, blanquecinas, a veces bastante fragrantés, en espigas ó ra- cimos axilares delgados y pendientes, cuyas masculinas constan de un periantio 6-partido, algo coloradito, con 6 estambres; en las femeninas es adherente y también 6-partido ; ovario no enteramente infero, cuyo vértice lleva 3 estilos con estigma cabezudo : dioscoreay F. 19. 244. Estambres pocos y en número determinado; plantas herbá- ceas ó matas, 244 ¿¿5. — Estambres muchísimos é indeterminados ; árboles ó arbustos frútices con frecuencia espinosos, de hojas sim- ples alternas, algo coriáceas, cortamente pecioladas, sub-redondea- das, aovadas, festoneadas y agudas. Flores pequeñas en glomérulos axilares, de cáliz con 4-5 sépalos escamiformes pestañosos é imbri- cados ; en las femeninas están diminutos ó reducidos á brácteas sub- distantes; corola nula; estambres á veces ceñidos por glándulas, de anteras versátiles y cortas. Ovario ceñido por un disco lobulado ó por glándulas, 2 ó plurilocular, con óvulos las mas veces mellizos en las celdas, en cuyas paredes están pegados; estilos 2 ó muchos, li- bres ó adheridos por la base; estigmas remellados ó bílobos. Baya indehiscente con el endocarpio endurecido, cuyas semillas solitarias y obovoídeas tienen la testa lijeramente coriácea; embrión sin en- dospermo y con los cotiledones orbiculares : Jtacoicrtia, F. 87, T. IV, 244 his. Flores nunca amentáceas; tallos nunca jamás articula- dos ni suculentos tampoco ; 4 ó mas estambres ; el fruto es un aque- nio, 245. — Flores siempre amentáceas, semi-anidadas las feme- ninas en el eje espeso; mata fruticosa inferiormente, desparramada ó derecha, con las ramitas tiernas herbáceas y suculentas, alta de 1 1|2' á 3', criándose en los sanitrales, lampiña y de un color verde amarillento ; hojas simples, opuestas, pequeñas, espesas y carnosas, casi sentadas, oblongo-lineares, cuya cara superior es llana ó algo cóncava á manera de gotera, mientras la inferior es convexa. Flores en amentos axilares ó terminales, los masculinos largos de como 1" á 1 1|2" son imbricados y con 4 caras poco pronunciadas, cuyas fio- 220 MÉTODO DICOTÓMICO. res constan de 4 estambres alternando con algunas escamas mem- branosas, encerrados en un involucro bífido y delgado ó insertos por la base de una bráctea orbicular ; mientras que los femeninos son mas cortos v obloníro-cilíndricos ú ovales, cuyas flores sin envólu- ero son semi-engastadas en el eje carnudo y sostenidas por una bráctea única, de ovario 4-loeular coronado por un estigma bilobii- lado. El fruto consiste en algunas bayas reunidas entre sí formando un sincarpio, las 4 celdas de cada baya, de endocarpio coriáceo, con- tienen cada cual una semilla de testa membranosa, y un embrión arqueado y sin endospermo : latis, F. 52. 245. Vejetales siempre herbáceos de raíz mas ó menos carnosa y perpendicular ó con un rizoma: flores dioicas, polígamas y herma- froditas á la vez; fruto aqueniforme ó abayado, 246. — Frútices ó vejetales fruticulosos ó herbáceos, de raices siempre fibrosas y sin rizoma; flores dioicas ó andrójinas; siempre un aquenio, aveces contenido en el periantio carnudo, 248. 246. Hojas bastante grandes, cuya base del peciolo está provista de una membrana envainadora ú ochrea: aquenio envuelto en el periantio mas ó menos vejigoso, 247. — Hojas lineares fasciculadas, cuyos haces son esparcidos, y sentadas; periantio coroliforme; baya pisiforme : vejetales de cuyo rizoma salen retoños mas ó menos gruesos, que se vuelven tallo derecho, ramoso superiormente y alto de 3' á 5', lampiño y cilindrico ; hojas pequeñas lineares, subuladas, caducas, lampiñas, de un color verde oscuro y lustrosas, derechas y cuyos haces salen de la axila de una bráctea membranosa. Flores axilares de ordinario mollizas, cuyo pedúnculo, bastante largo 3- pendiente, es articulado hacia la parte mediana, de periantio peta- loídeo, partido en 6 divisiones iguales, sub-campanudo ; en las mas- culinas hav 6 estambres inclusos cuvos filamentos cortos se insertan en el 1¡3 inferior del periantio, mientras que en las femeninas hay un ovario globoso trilocular, uni-ovulada cada celdilla, v de cuvo ápice sale un estilo único y trígono terminándose por 3 estigmas. Baya roja pisiforme, lampiña y lustrosa con 2 y raras veces 3 se- semillas : asparragns, F. 16, T. Y. 247. Plantas bisanuales cuyas raices perpendiculares son á veces bastante gruesas y mas ó menos carnudas, de las cuales sale un tallo único, derecho, mas ó menos estriado, ordinariamente lampiño, poco ramoso, alto de F, 2', 3' algo mas ó menos ; hojas bastante grandes, de figura v tamaño muv variados, alternas v largamente pecioladas cuando son radicales, mientras que las caulinares son tanto mas cortamente pecioladas cuanto mas superiores son, enteras y frecuentemente undulosas por los bordes. Flores pequeñas ver- duscas en panojas terminales muy furnidas, de un periantio mem- branoso con 6 divisiones, desiguales ordinariamente, cuyas interio- res son sinuosas, á veces glandulosas, membranosas, persistentes y á veces vejigosas, mientras las 3 esteriores, mucho mas pequeñas y caducas, alternan con las primeras; en las masculinas 6 estambres hay pegados en el fondo del periantio, de filamentos muy cortos y capilares, con anteras derechas, oblongas y biloculares ; mientras las femeninas contienen un ovario pequeño triangular ó turbinado, VE.IETALES FANERÓGAMOS DIOICOS. 221 de CUYO ápice salen 3 estilos capilares, estendidos, bastante largos para salir afuera entre los sépalos y terminándose por un estigma apincelado ó ramoso y glanduloso á la par. Aquenio pequeño, trian- gular ú oval, mas ó menos lustroso, negro, lampiño, envuelto por los sépalos mas ó menos crecidos; embrión oblongo lateralmente situado en el endospermo feculento bastante desarrollado : rumex, F. 50, T. II, S.-T. III, G. I. 248. Aquenio envuelto en el cáliz que se ha vuelto carnudo; fruta simulando ])ues una baya; estambres 5, 4; frútices con pelos de picadura que causa escozor ó aguijones que producen igual efecto, 249. — Aquenio mas ó men(ís envuelto por el periantio que no se vuelve nunca carnoso, 250. 249. Yejetales que á veces se vuelven arbuvstos de tallo ramoso, con hojas grandes alternas, pecioladas, aovadas, ao vado-oblongas, elípticas ó elíptico-oblongas, ovales o redondeaditas , acorazonadi- tas, escotadas, redondeadas ó cuneiformes por la base, mientras que por el ápice son ol)tusitas o provistas de una punta obtusa, enteras, undulosas, aserradas, festoneadas ó fcbtoneado-aserradas, pubes- centes, lampiñas ó alampiñadas, de cara superior prosista de rafi- dias puntiformes ó sin ellas, ó muchas y lineares; flores en cimas axilares ó laterales divaricado-dicótomas, tricótomas, ó en grupos dispuestos en espigas ó axilares, cuyas masculinas, de periantio 4, 5-partido, tienen 4 estambres; en las femeninas el periantio es 4- partido ó 4-lobulado, y se vuelve carnoso y abayado; ovario único oval ó redondeado, cuyo ápice lleva un estigma sub-sentado y apin- celado : ícrera, urtihaca, Xobis, F. 39, T. II, G. I. 250. Frútices, matas ó plantas herbáceas sin pelo punzante ni aguijones tampoco, 250 Ms. — Plantas herbáceas anuales, bisanuales ó vivaces, de corteza muy fibrosa, fuerte y tejible, con frecuencia provistas de pelos muy punzantes y cuya picadura causa mucho es- cozor, de hojas simples, alternas, largamente pecioladas ordinaria- mente, mas ó menos grandes, de ordinario pubescentes ó velludas, enteras, festoneadas ó aserradas, de base masó menos acorazonada, mientras el vértice es con una punta ó sin ella, acompañadas de es- típulas que faltan con bastante frecuencia. Flores en racimos axila- res bastantes veces como apanojados, pequeñas y separadas, de periantio con 4 divisiones, en las masculinas, profundas, concavas, obtusas, iguales y redondeadas, conteniendo 4 estambres, de fila- mentos alesnados, opuestos á los sépalos y diverjcntes, mas largos que ellos, esertos y situados en el fondo del cáliz en derredor de los rudimentos del ovario ; mientras que en las femeninas el periantio tiene solo dos sépalos de igual forma, persistentes ; ovario supero, unilocular, oval, de cuyo ápice sale un estigma sentado, formado de pelo glanduloso y dispuesto á manera de nudo ó de pluma. Aquenio oval ó mejor comprimido, liso y envuelto en el periantio : urtica, F. 39, T. ÍI, G. III. 2^0 Ms. Plantas siempre herbáceas; flores con estigma apince- lado, 19G. — Siempre frútices; flores cuyo estigma no está apince- lado, pero sí filiforme, persistente y con pelo por uno de sus lados, 195. 222 MÉTODO DICOTÓMICO. 251. Vejetales polígamos monoicos; un solo individuo teniendo á la vez flores masculinas ó femeninas y hermafroditas, 252. — Políga- mos, dioicos ó cuyas flores masculinas ó femeninas y hermafroditas se hallan en dos ó mas individuos ó sujetos vejetales diferentes, 299. 252. Plantas herbáceas, 253. — Arboles, arbustos, frútices y ma- tas, 261. 253. Flores nunca desnudas, 253 his. — Flores desnudas y en es- pádice ; plantas frecuentemente de tallo trepador, con hojas alter- nas, simples, bastante grandes, de ordinario aovado-oblongas, enteras ó agujereadas, cuyo peciolo, mas ó menos largo, está pro- visto por la base de una vajina algo floja y dilatada. Espata blan- cuzco-amarillenta, abierta y por fin decidua; espádice sentado femenino por la base, mientras que el vértice es hermafrodito; estambres sub-indefinidos, de filamentos lineares comprimidos, cu- yas anteras terminales, aovadas y biloculares tienen las celdillas opuestas, abriéndose lonjitudinalmente, y situados en derredor del ovario bilocular, rafidioforo, con 2 óvulos sub-coiaterales, ascen- dentes, anátropos y situados por la base del tabique ; del ápice sale un estilo cortísimo terminado por un estigma cabezudo : monstera, F. 8, T. II, S.-T. I. 253 Hs. Flores glumáceas ; una cariópside ; una caña por tallo, 255. — Flores nunca glumáceas; fruto capsular que es un pixidio mas ó menos lejítimo, 254. 254. Flores en grupos ordinariamente espiciformes, todas ó las superiores solamente dispuestas en panojas terminales y de perian- tio con 5, 3 sépalos, con 5, 3 estambres; estilos 2 ó 3 ; fruto es un pixidio, véase n. 197. — Flores pequeñas membranosas, en cabezas ó espigas; grupos dispuestos en panojas muy ramosas, con brácteas membranosas y ordinariamente cóncavas; plantas anuales, fruticu- losas y hasta leñositas, rastreras, aveces algo trepadoras, lampiñas ó pubescentes, de tallo ramoso, €on hojas simples, alternas, peciola- das, aovadas, lanceoladas, aovado-lanceoladas y elípticas, aguzadas ó con una punta, lampiñas ó de cara inferior pubescente ; periantio con 5 sépalos, ceñido en las femeninas y por fin envuelto en lana; estambres 5 cúpula basilar de ordinario sin dientes, anteras elípti- cas; estigmas 2, 3 sub-sentados, algunas veces coadheridos cuando jóvenes. Pericarpio utricular y por fin reventándose irregularmente : iresine, F. 55, T. I. 255. Flores en panojas solas ó en panojas y en espigas á la par. 256. — Flores siempre en espigas delgadas y bastante largas, dis- puestas á manera de los dedos de la mano; hojas con la lodicula hendida; las flores de las espiguitas lineares son mellizas, una es- tando casi sentada y la otra pedicelada; gluma de 2 valvas, oval- oblongas, cilindricas y sin arista; glumeía de 2, 3 valvas cóncavas, cuya última, mas pequeña, falta á veces; la segunda varia bastante, mientras la primera es tan larga como la gluma misma. Yerba de como 8'' á 10" de alto, con hojas linear-lanceoladas, de vaina hen- dida : digitaria, F. 10, T. X. 256. Todas en panojas terminales mas ó menos densas y grandes, 7E JÉTALES FANERÓGAMOS POLÍGAMOS. 223 257. — Las masculinas j polígamas en panojas grandes terminales, mientras las femeninas son en espigas axilares : véase 172. 257. Formadas de espigiiitas reunidas dos por dos, de las cuales una es femenina y la otra liermafrodita; glumela terminándose por una arista, 258. — Espiguitas solitarias; arista saliendo del fondo de la gluma ; estigma sentado, 259. 258. Yerbas vivaces ó anuales, cu,ya altura varia de 1' hasta 5' y 6' de altura ; hojas linear-lanceoladas ó lanceoladas y bastante an- chas á la vez; las espiguitas que constituyen las panojas son fre- cuentemente dijitadas ; flores masculinas pedunculadas sin arista, mientras las hermafroditas son al contrario sentadas, aristadas y provistas de pelo pegado por la parte esterior de la gluma. Algunas especies son aromáticas : andropogon. F. 10, T. II. 229. Gluma biflora, con dos valvas dentadas; arista torcida, 260. — Gluma uní ó biflora, con valvas sin dientes, arista no torcida ; yerbas anuales de ordinario bastante altas, de hojas largas y lan- ceoladas envainadoras por la base ; panojas ramosísimas compues- tas de espiguitas masculinas con flores membranosas y sin arista, mientras que las de las hermafroditas son coriáceas y ordinaria- mente aristadas; las masculinas no están jamás contenidas en la misma gluma que las hermafroditas : Jiolcíis, F. 10, T. II. 260. Plantas anuales que tienen mucha analojía con el género anterior, de las cuales se diferencian porque una de las dos flores contenidas en la crluma es hermafrodita y sentada, mientras la otra masculina 6 estéril es pedicelada. En las flores femeninas la glu- mela es formada de 2 valvas y la gluma de 3, cuya segunda es aris- tada y la tercera pegada de una pajit-a velluda; la arista torcida sale de entre los dientes de la valva inferior ; gluma sin arista en las masculinas ; cariópside bastante gruesa : sorghum, F. 10. T. II. 261. Cuyo tallo es un estipe ó á primera vista parece como un estipe pequeño, 262. — De tronco ó tallo lejítimo, 264. 262. P^stipe lejítimo; flores con un periantio único; fruto drupa-, ceo; una espata, 2Q2Ms. — Estipe espurio ó tallo estipiforme; flores completas; fruto abayado ; siempre espata nula. Árbol sin ramas algunas, de 20'-2' de altura, cuyo tronco delgado se termina por hojas grandes, simples, espatulado-lanceoladas, tiesas, lampiñas, que forman una roseta en su ápice, de base largamente aguzada, terminándose en un peciolo corto, obtusitas, con dientes apartados, espinescentes y encorvados ó sub-enteras, adornadas de venas acos- tilladas, delicadas, que las hacen reticuladas por ambas caras; de color verde pálido, largas de F-l 1|2' y anchas de 3", cuyo peciolo bruno, espeso y largo de 4-6'" solamente. Flores color de escarlata en racimos flojos, espiciformes, alargados, axilares ó situados en las axilas de las hojas mas adultas ó mas inferiores y mitad ó 4 veces mas largos que ellas, cuyosjpedícelos son de lo largo de las flores que llevan; cáliz 5, 4-partido ; corola enrodada, coronada por la garganta de 5, 10 apéndices redonditos, y con 3-4'" de diámetro; estambres 5 formando un tubo en las flores masculinas, mientras que en las femeninas son distintas, cuyas anteras estrorsas, cortas, ordinariamente truncadas, ge abren por una grieta; ovario con pía- 2*24 MÉTODO DICOTÓMICO. centas pliiriovulados ; estigma obtuso. Baya grande plurib-pcrnia: theoplirasta ó clavija, F. 80. 262 lis. Una sola espata, 263. — Dos espatas completas, cuya es- terior es comprimida y la interior lanceolada y con ápice abierto ; por fin fibroso-laciniadas, 96. 263. Espata mucronada y asurcada por el dorso; fruto muy grueso, 91. — Espata leñosa, persistente, espesa, muy larira, en for- ma de canoa y con un pico muy largo; fruto pe(|ueño. 92. 264. Estambres monadeltbs, cuya columna óandróforo hipojínico lleva 10-20 anteras de celdas paralelas; 5 carpidios insertos en el vértice de un carpóíbro, unidos solamente por el estilo simple ; fruto de tantos folículos distintos ó de 2 ó 3, algunos de ellos abortando siempre. Flores incompletas ó con un solo periantio, 265. — Estam- bres monadelfos ó libres, hipojínicos ó pirijínicos, pero nunca con andróforo columnario coronado por anteras numerosas ; fruto nunca formado de folículos, 266. 265. Arboles grandes que se elevan á 40'-50' de altura, corpu- lentos y frondosos ; con hojas simples, alternas, largamente pecio- ladas, acorazonado-redondeadas, 5, 3-lol)uladas ó aovado-oblongas y ordinariamente enteras, de cara superior lampiña ó alampiñada, mientras la inferior es aterciopelada ó pubescentita, con las costi- llas, nervaduras y venas muy pronunciadas, cuyas anastomosis nu- merosas le dan un aspecto particular, anchas de 12" á 14" sobre 9- II de largo, con el peciolo un poco crecido tanto por la base como por el ápice aterciopelado ó pubescentito y largo de 6 á 8"; con dos cicatrices acompañando á su inserción, una de cada lado, las cuales señalan la existencia de las dos estípulas que se observan solamente al abrirse la yema, son triangulares, derechas, largas de como 5"'- 6"' y anchas de 1 1^2-2"' por la base, aterciopeladas y de color aca- nelado oscuro por la cara esterior. Flores en racimos apanojados axilares largos de 8" á 10", de brazos alternos y bozosos como el eje principal y las ramitas que les llevan, en número de 3 á 5 y largos como de 2 1|2" á 3", con una bráctea por su inserción, con las flores dispuestas sobre ellos por grupos de á 3 ordinariamente y por el vértice, cuyo pedúnculo cortito y bastante grueso, común á cada grupo, sale de la axila de una bráctea igual á la ya señalada, mem- branosa, pubescente y triangular, también larga de como V" \ del ápice de ese pedúnculo y de cada lado sale un pedicelo gruesecito también con 3 bracteitas por la base, de las cuales la del medio es mucho mayor que las dos laterales opuestas, después de ellas sigue el pedicelo mas delgado y largo de como 4'" á6"', terminándose por una flor primorosa de como lÓ'" á 15'" de diámetro y larga de 6 á 9", de color amarillento teñido de morado esteriormente, y mas pálido interiormente con manchas moradas ; periantio campanudo ó rotáceo-acampanado, 5-fido, con los segmentos ovales y puntiagu- dos, arroUaditos hacia fuera; en las flores hermafroditas la columna no existe, pero está reemplazada por una membrana corta que for- ma por la base del ovario una especie de involucro con 5 lóbulos poco pronunciados ó quizás solamente o ángulos que cargan cada uno con 3 estambres cuyos 2 laterales son casi sentados, mientras VEJETALES FANERÓGAMOS POLÍGAMOS. 225 que el del centro tiene el filamento algo mas larguito, anteras ama- rillas, bilociilares y casi escondidas por la base del ovario bastaifte desarrollado en relación con ellas. El pistilo se compone pues de un ovario bastante grueso formado de 5 carpelitos, estipitado, pubes- cente ; estigma con 5 lóbulos y amarillento ; los carpelos se separan los unos de los otros, toman la figura de una estrella, y se vuelven folículos de un color ceniciento aleonado después de caido el bozo que cubría los ovarios ; son algo estipitados, desigualmente ovales y algo fusiformes, largos de como 4''-4 1{2" y 2"-2 li2" de diámetro en la parte mediana, contienen algunas semillas pegadas de cada lado de la sutura, situada por la cara interna de los ovarios que se ha vuelto superior en los folículos por causa de su posición horizon- tal; se abren por esa sutura principiando por el ápice; los bordes de la abertura son de un hermoso color agamuzado, el interior algo mas pálido y de aspecto sedoso por estar cubierto de una peluza blanca, tiesa, lustrosa y punzante ; las semillas, en número de 6 por causa de aborto, son insertas en la placenta sutural alternativa- mente por medio de un podójino bastante desarrollado, discoideo, amarillo, son negras, lustrosas, ovoideas ó quizás mejor elípticas, largas de como 13"' á 14'" y anchas de b"'-T", de epispermo ó te- gumento como coriáceo y bastante espeso : sterctdia, F. 105. 266. Fruto mas ó menos carnudo, drupáceo ó abayado, 267.-^-' Fruto seco capsular ó no capsular, 2'7'7. 267. Fruto siempre drupáceo, 268. — Fruto no drupáceo como abayado ó formado de 2 ó 3 carpelos, de los cuales 1 ó 2 suelen abor- tar; árboles bajitos ó arbustos pubescentes ó lampiños, con hojas de 3 en rama ordinariamente, cuyas hojuelas pecioladas ó subsesiles son elípticas,- enteras y repandas, sinuado-aserradas ó aserraditas, mas ó menos obtusas ó con una punta, coriáceas, enteramente lam- piñas ó solamente por la cara superior lustrosa, mientras la inferior es pubescente ó alampiñada. Flores en racimos axilares con fre- cuencia ramosos ó fasciculados, frecuentemente con una bráctea por la inserción del pedicelo, de cáliz con 4 sépalos mas ó menos ovales ú orbiculares, sub-campanudo y pubescente; corola de 4 pétalos ordinariamente mas largos que el cáliz y cuya uña lleva algunas veces una escamita peludita situada por la cara interior; estambres 8 mas largos que la corola é insertos en el disco cuya parte interna tiene pelo, de filamentos subulados mas ó menos derechos, lampiños ó pubescentes, cuyas anteras introrsas son ovoídeo-oblongas, bilo- culares y dorsifijas. Ovario dídimo, ovoideo, mas ó menos velludo, con un estilo bífido saliendo de su ápice : schmidelia, F. 121, T. I, G. V. 268. Drupa lejítima mas ó menos gruesa, 271. — Drupa nucifor- me ó una nuez, 269. 269. Flores apétalas, drupa nuciforme elíptica puntiaguda, bi- convexa, ú oval-oblonga y obtusa por ambos estreñios, comprimida^ márjen mas ó menos aguda y prolongada, 270. — Flores completas; nuez obaovada, lijeramente alada o de márjen comprimida y algo dilatada; árboles bajitos ó arbustos ramosos, que se crian en los lu- gares pantanosos de las orillas del mar, con hojas simples, opuestas, TOMO I i Ó 226 ■ MÉTODO DICOTÓMICO. bien enteras, sin venas, de peciolo bigianduloso por el vértice, oval- (íblongas ú ovales, lampiñas; flores en espig'as pedunculadas ordina- riamente compuestas por la base y blanquecino-piibescentes, de cáliz persistente 5-lobulado, cuyo limbo es corto, con el tubo camipanudo en las femeninas; corola con 5 pétalos diminutos y deciduos; es- tambres 10 inclusos; nuez larga de 6'" : laguncularia, F. 139, T. II, G. III. 2'70. Arboles muy altos, corpulentos y frondosos, que se elevan á 40', 60', 80' y 100' de altura, de hojas simples, alternas, bien ente- ras ú ondulosas, obaovado-oblongas ó cuneiformes, oblongas, agu- zadas por la base en peciolo largo y sub-acorazonadas ó redondea- das por la base algo aguzada , sub-glandulosa ó biglandulosa inferiormento. lampiñas por la cara superior, mientras que la infe- rior es alampiñada ó pubescente; flores en espigas axUares delga- das, simples, pedunculadas y cilindricas, cuyo vértice lleva flores masculinas, mientras la base está ocupada por hermafroditas, cuyo periantio 5-fido y de limbo ciatiforme es deciduo; 10 estambres lije- ramente esertos : termútalia, F. 139, T. II, G. I. 271. Flores provistas de un cáliz y de una corola, 272. — Flores apétalas : árboles bajitos ó arbustos sarmentosos inermes ó con es- pinas estipulares, de hojas simples, alternas, 3-nervias, aovadas, aí)vado-oblongas, oblicuas por la base, aserraditas hacia el vértice ó enteras, alampiñadas, pubescentes ó lampiñas, pecioladas ; flores fasciculadas ó como algo cimosasy axilares, pediceladas y formadas de un cáliz deciduo 5, 6-partido, con 5 estambres inclusos y de an- teras introrsas ; ovario unilocular globoso ó aovado, de cuyo vértice salen 2 estilos divaricados ; óvulo campilótropo y suspendido. Dru- pita globosa ó aovada, pedicelada: celtis, F. 40. ^ 272. 'Ovario único, 273. — 3 ovarios distintos, que se vuelven car- pidios, drupáceos, con una semilla solitaria y ascendente ; árbol alto, bastante corpulento y frondoso, con hojas alternas, imparipi- nadas, formadas de 9, 11 hojuelas, opuestas, pecioladas, oblongas ú oblongo-lanceoladas, con una punta obtusa, coriáceas, lampiñas, bien enteras y largas de 4"-2" sobre 2 lí2-3" de ancho ; hoja en- tera, larga de 12 á 15"; flores en cimas corimbiformes ó apanojadas, axilares, pubescentes, mucho mas cortas que las hojas, y de cáliz diminuto 5, 4-fido ; corola con 5 pétalos largos de V" , oblongos, de color amarillento pálido y verdusco á la par; estambres 5, 4, eser- tos, saliendo de un disco ; estilo 3-particlo ; drupitas globosas, ne- gras, de 6'"-3'" de diámetro; semillas con embrión sin endospermo . picrcena, F. 110, G. V. 273. Hojas compuestas, 274. — Hojas simples; árboles grandes, corpulentos, muy coposos y que se elevan á 40'-50' de altura, de ho- jas alternas, coriáceas, lampiñas, oblongo-lanceoladas ó lanceola- das, con una punta, cortamente pecioladas y bien enteras, de un color verde oscuro y lustrosas cuando adultas, mientras que cuando tiernas son moraditas, un poco undulosas por los bordes, largas de 10-8" sobre 2 1^2 3-3" 1|2 de ancho, algo aguzadas por ambos es- treñios; flores pequeñas amarillento-verdosas, en panojas termina- les pubescentes, y formadas de un cáliz 5, 4-partido deciduo, de una VEJETALES EANERÓGAMOS POLÍGAMOS. 22'7 corola con 5, 4 pétalos mas largos que el cáliz ; estambres 5 períji- nos y algo esertos, de los cuales 1, 2 solamente son fértiles, mien- tras los demás se quedan estériles; ovario 1 locular con 1 solo óvulo ascendente, de cuyo ápice sale un estilo simple corvo terminado por un estigma algo cabezudo. Drupa aovada ú ovoidea un poco arriño- nada, larga de 2''-4" sobre 1 1;2 á 2" de diámetro, lampiña y glauca antes de madura, después mas ó menos amarilla ó rosada ; semilla contenida en una especie de hueso no muy duro comprimido oval, cubierto de muchísimas fibras que penetran en la carne amarilla y con dos valvas ; radícula inferior y ascendente : mangifera, F. 126 G. II. 274. Ovario con 5-1 celdas, de las cuales algunas abortan siem- pre, conteniendo 1 óvulo solitario, 2*75. — Ovario con 5-1 celdas todas ovulíferas y conteniendo dos óvulos ; árbol alto, corpulento j muy coposo, de cuya corteza del tronco sale una resina blanca muy aromática, con hojas imparipinadas, largas de 6 á 8", cuj^o raquis lo es de 4" con la mitad inferior sin hojuelas, y formadas de 9-3 ó de 13-1 hojuelas opuestas y pecioladas, aovado-oblongas, ordinaria- mente con una punta, de cara superior lampiña y lustrosa, mientras la inferior es peluda ó alampiñada ; largas de 3'''-2 1[2"' con un pe- ciolo largo de 8 á 10'" ; flores fasciculadas y dispuestas en racimos axilares ó terminales, cuyo raquis es lampiño ó velludo-pubescente; de cáliz 3, 5-partido ; corola con 3, 5 pétalos valvares, oblongos, largos de 1'" y mucho mas que el cáliz ; estambres 6-10 períjinos con anteras oblongas ; ovario 3-locular, con un estilo 3-lob*ulado por el ápice. Drupita con 3, 2 valvas, conteniendo una sola semilla por causa de aborto ; embrión con los cotiledones arrugados ; putamen ó huesecito largo de 3"\ con una área preeminente, aovada y larga de 1 li2'", situada por el lado interno: hiirsera, F. 125, G. II. 275. Drupa de tamaño regular ovoidea ú obovoídea amarilla ó moradusca, larga de T -2''; estambres 10-8 insertos por debajo de un disco hipójino ; cáliz 5, 4-fido : corola con 5, 4 pétalos, 276. — Drupa siempre pequeñita, de color purpúreo oscuro ó roja ; estam- bres 3, 4, insertos en un disco perííino ; cáliz 3, 4-partido y colori- do ; corola con 3, 4 pétalos : arbustos ordinariamente de 4' 1|2 á 3^ de alto, pero á veces se elevan á 10', 15' y hasta 30', muy ramosos, y al cortarlos ramos dejan salir una leche amarilla ; hojas alternas, imparipinadas, aproximadas hacia el vértice de las ramas ó tallos, formadas de 8, 10, 5, ó 9, 10 pares de hojuelas sésiles ó pecioladas, de cara superior lampiña ó alampiñada, mientras la inferior es alampiñada ó peluda color de orin ó por fin lampiña, bien enteras, ó con 3 ó 5 espinas saliendo de la costilla y de las principales ner- vaduras, oblongas obtusas ó con una punta , sub-truncadas por la base, ó aovado-deltoídeas y sub-acorazonadas, largas de 1", 2'' 6". Flores purpúreo-oscuras, pequeñas, fasciculadas ó agrupadas á lo largo de brazos distantes y racemiformes formando una panoja flo- ja, pubescente ó alampiñada y peluda color de orin, tan larga ó mas corta que las hojas ; ovario unilocular con un óvulo pendiente de un funículo central y ascendente"; del ápice salen 3 estigmas sentados : comocladia, F. 128, G. II. 228 MÉTODO DICOTÓMICO. 276. Arboles bastante grandes ó bajitos muy ramosos y á veces bastante corpulentos, con hojas deciduas imparipinadas, lampiñas y formadas de 3-8 ú 8-10 pares de hojuelas mas ó menos pecioladas, aovado-lanceoladas ó lanceoladas, elíptico-oblongas aguzadas ú ob- tusitas, sub-enteras á aserradas; flores amarillentas ó purpúreas, dispuestas en racimos ó en panojas terminales 6 laterales y saliendo antes que las hojas, largas de 6" á 12" ó solamente de 3"-4", enton- ces mas ó menos que las hojas. Ovario con 5-3 celdas todas fértiles, de cuyo ápice salen 5-3 estilos cortos. En el ápice de la drupa se ven los rudimentos de los estilos; hueso lobulado : s^ondias, F. 126, G. I. 277. Fruto capsular ó leguminoso, 278. — Fruto consistiendo en una especie de nuez de concha coriácea lisa, seca, arriñonada y si- tuada en el vértice del pedúnculo carnudo, piriforme simulando una fruta, largo de 3"-5", con 2-3'' de diámetro, amarillo ó colorado y lustroso. Arboles de 15' á 30' de altura, muy ramosos, de hojas sim- ples, alternas, bien esteras, coriáceas, lampiñas, obaovadas ú ova- les, redondeadas ó escotadas por el ápice, cortamente pecioladas, largas de 5-4" l|2-6 1[2", con el peciolo de 8'" y anchas de 3 1|2- 3 l|4-2"; flores acompañadas de una bracteita aovada y aguzada, en panojas terminales cuj'os brazos distantes son corimbíferos, siempre una flor es mas larga ó escede á las demás ; de cáliz 5-par- tido deciduo y pequeño ; corola con 5 pétalos, mucho mas largos que el cáliz, lineares, aguzados, recorvados y arrollados hacia fuera; es- tambres 10, 9-períjinos, de los cuales 1-4 solamente se hallan en las flores fértiles; ovario unilocular, cuyo óvulo es ascendente; estilo simple y corvo. Nuez comprimida, algo arriñonada, larga de como 1" y color aplomado mas ó menos oscuro; cuya concha bastante es- pesa, coriácea por afuera, tiene el mesocarpio celuloso y con un aceite cáustico ; semilla cilíndrico-arriñonada, con la raicilla supe- rior y ascendente : a/iacardium, F. 129. 278. Una legumbre con ó sin tripa ó pulpa, 279. — Una cápsula septícida, 3 ó 4, 6-locular, ordinariamente samaroídea, cuya ala dorsal suele ceñir la celda, con semillas crustáceas y sin arilo; ar- bustos ramosos, altos de 6' á 10' de ordinario viscosos, con hojas las mas veces formadas de una hojuela única, obovada-lanceolada ú ob-lanceolada, espatulado-lanceolada, oblongo-lanceolada, ó en fin linear-lanceolada, entera y algo coriácea ; flores pequeñas en raci- mos ó corimbos terminales flojos, de periantio único con 4 ó 5-3 sé- palos ; estambres 8, 6, 10 insertos en un disco hipojínico; ovario con dos óvulos en cada celda, cuyo superior es erguido, mientras el inferior es pendiente, del ápice sale un estilo central 3-tetrágono, de ápice 3, 4-fido, cuyos lóbulos* llevan el estigma por la parte in- terna : dodonaa, F. 121, T. 111. 279. Estambres cuyas anteras llevan una glándula por el ápice, 280. — Estambres de anteras sin glándula alguna en el ápice, 286. 280. Glándula de la antera constante, 281. — Glándula faltando alguna vez que otra : árboles bastante grandes, corpulentos y copo- sos que se elevan á 30'-45' de altura, y son armados con espinas axi- lares, lampiñas; hojas bipinadas, con 1, 2 pares de pínulas formadas VEJETALES FANERÓGAMOS POLÍGAMOS. 229 de 20, 15 pares de hojuelas, linear-oblongas, obtusas, lampiñas, largas de 4"'-6"' y anchas de l"'-2"' ; una glándula orbicular algo deprimida y sentada está entre la inserción de los raquises de las pínulas. Flores en espigas amentiformes largas de como 2" j blan- cas, de cáliz con 5 dientes; corola con 5 pétalos velludos por la cara interna; legumbre falciforme, entera, comprimida y por fin espesita, indehiscente, cuyo endocarpío se parte en una serie de artejos, larga de 6"-8", ancha de 6"' y por fin espesa de 3" -4" : prosopis, F. 130, S.-F. 3, T. II, G. IX. 281. Glándula terminal, 284. — Glándula no terminal, anteras ovoídeo-oblongas, 282. 282. Legumbres muy largas de 2-8' y anchas de 3"-4", compri- midas y llanas y formadas de artejos que se desprenden los unos da los otros y del borde continuo que se queda entero y persistente, 283. — Legumbre anchamente linear, llano-comprimida, larga de 6' -3", bivalve y con semillas comprimidas : árbol alto inerme, de hojas bipinadas, cuyo raquis lleva glándulas, con 15 á 20 pares de pínulas de 30-80 pares de hojuelas cada una, diminutas, lineares, largas de r"-2'" alampiñadas; flores blancas sésiles dispuestas en cabezas ó espigas axilares, mas cortas que los pedúnculos pubescen- titos, de cáliz 5-dentado conteniendo 10 estambres; legumbre mo- noliforme, sinuosa, estipitada, cuvas valvas son coriáceas y ásperas : piptadeíiia, F. 130, S.-F. 3, T. li, G. VIL 283. Arbustos sarmentosos cuyos numerosos ramos abejucados al- canzan hasta la cumbre de los árboles mas altos, inermes y cirrífe- ros, de hojas bipinadas con frecuencia cirríferas ó provistas de un zarcillo, formadas de 1-2 ó de 4-6-2 pares de pínulas con 2-5 á 6-8 pares de hojuelas oblongas ó elíptico-oblongas, mas ó menos inequi- laterales, redondeadas por el ápice, lampiñas ó alampiñadas infe- riormente ; ñores en racimos espiciformes axilares solitarios ó me- llizos, ó terminales y apanojados y formadas de un cáliz .5-dentado con 10 estambres : enfada, F. 130, S.-F. 3, T. II, G. I. 284. Estambres monadelfos por la base, de los cuales 5 solamente son fértiles y .5-15 estériles ; anteras oblongas con la glándula sen- tada, 285. — Estambres no monadelfos 10-8 todos fértiles, anteras ovoídeo-oblongas con la glándula estipitada : árbol de hojas bipina- das con 2-5 pares de pínulas distantes, y formadas de 6-10 pares de hojuelas, alternas, ovales ú oval-oblongas, lampiñas y largas de V" ] flores en racimos de cáliz 5, 4-dentado, conteniendo los estambres inclusos cuya glándula sola" sale por afuera; legumbre lijeramente falciforme, larga de 6"-8" y ancha de 6", linear-comprimida, un poco crecida por causa de las semillas biconvexas que contiene, y bivalve : adenanthera, F. 130, S.-F. 3, T. II, G. VIH. 285. Árbol alto, corpulento y coposo, de hojas bipinadas con 20, 10 pares de pínulas formadas de 50, 30 pares de hojuelas lineares, falcadas por el vértice y prolongadas por la base, lampiñas y lustro- sas, largas de 3'" á 4'" y anchas de 1|2"' : flores blancas, en espigas largas de 6"-8", frecuentemente agrupadas ó apanojadas en el vér- tice de las ramitas, con el eje tomentoso color de orin, de cáliz 5- dentado, cuyos dientes anchos son lijeramente imbricados; corola 230 MÉTODO DICOTOMICO. profundamente 5-fida, larga de 2'" ; filamentos estériles, 8. Legum- bre comprimida larga de 10 á 15'' y ancha de 2 á 3 : pentaclethra, r. 130, S.-F.3, T. I. 286. En número definido é indefinido á la par, 290. — Siempre en número definido, 287. 287. En número de 8, 10, 6, 12, de anteras globosas; legumbre comprimida dehiscente, cuyas valvas se separan del borde entero, articulado ó continuo; raquis sin glándula ordinariamente, hojas sensibles, 288. — Estambres 10, de anteras ovoidoblongas, legumbre anchamente linear, estipitada, llano-comprimida, cartácea y bi- valve: raquis glanduloso, 289. 288. Arbustos ó matas muy ramosas, á veces plantas semi-leño- sas, aguijonosos ó inermes, lampiños ó pubescentes, de hojas ordina- riamente bipinadas, sensibles, por lo común desprovistas de glándu- las peciolares, formadas de pínulas cuyo número de pares varia de 1, 2, 3, 4 á 5, 7, 8, y 15 y con 3, 4, 5, 6 á 30, 15, 20, 60 pares de hojuelas mas ó menos oblongas, obovales, obaovado-oblongas, elíp- ticas, lineares, obaovado-redonditas, con una punta ú obtusas, lam- piñas ó pubescentes, etc., pequeñas siempre; fiores en cabezas pe- dunculadas y axilares, de cáliz dentado ó abortivo; corola con 4, 5 ó mas, rara vez con 3, 6 segmentos ; estambres ordinariamente esertos de anteras globosas, comunmente rosadas ó blancas; legum- bre comprimida, dehiscente, con las valvas articuladas ó continuas: mimosa, F. 130, S.-F. 3, T. II, G. II. 289. Arboles no muy altos, bastante ramosos y frondosos, iner- mes, cuyas ramitas y peciolos son pulverulento-pubescentes, con hojas bipinadas formadas de 4, 8 pares de pínulas, de 10, 20 pares de hojuelas, oblongo-lineares, con una puntita, oblicuas por la base, alampiñadas y glaucas inferiormente, largas de 3'"-4'". Flores blancas en cabezas pedunculadas ordinariamente fasciculadas en la axila de las hojas superiores, de cáliz 5-dentado; corola con 5 péta- los distintos mitad mas largos que el cáliz. Legumbre larga de 5"- 6'' y ancha de 8'"-10'", con las semillas comprimidas, lustrosas, co- lor castaño y situadas transversalmente á las valvas : leucana, F. 130, S.-F. 3, T. II, G. II. 290. Estambres siempre muchos ó en número indefinido, 291. — Estambres tan pronto muchos como al2:unos y en número definido. 297. 291. Legumbre torcida á manera de caracol ó espiralmente, abriéndose en dos valvas; semillas con ó sin arilo; hojas bipinadas de raquis sin glándula, 295. — Legumbre nunca jamás torcida, 292. 292. Legumbre hinchada, ó espesa y comprimida, mas ó menos pulposa, indehiscente ; estambres sub-distintos ó monadelfos ; espi- nas axilares, 296. — Indehiscente ó reventándose irregularmente ; semillas envueltas por un arillo pulposo ó no, pero entonces legum- bre alao pulposa; hojas pinadas ó bipinadas, de raquis glandulífero, 293. 293. Legumbre recta ó apenas arqueadita, comprimida y bastante espesa, ó sub-prismática, de márjen engrosada ó ensanchada, an- gulosa tante grue- sa, larga de algunas varas, llena, derecha ó de base estendida 238 MÉTODO DICOTÓMICO. por el suelo y de vértice ascendente, con hojas simples, alternas, envainadoras, ásperas, pelitiesas, enteras, lanceoladas, derechas y largas de 2' á 3' y anchas de 2" á 3", basinervias; flores en panojas terminales, moradusco-pálidas, piramidales, de brazos estendidos y horizontales, descompuestos y surdescompuestos, alternos, sobre el eje estriado, largas de 1 1|2' á 3', con el pedúnculo ; las muchísimas ñores que las forman son espiguitas paucífloras y mellizas ; una de las dos flores es sentada y la otra pedicelada, pero ambas son her- mafroditas y articuladas por la base; gluma bivalve con pelo sedoso larguísimo, persistente y moradito ; glumela univalvo y membrano- sa ; pajitas subuladas, pequeñas é iguales; ovario liso, de cuyo ápice salen 2 estilos largos, terminados por un estigma franjeado, con pelo sencillo y dentadito : saccharum, F. 10, T. Y. 327. Flores en espigas lejítimas y rarísimas veces apanojaditas, pero sí sencillas ó compuestas, 329. — Flores en panojaslejítimas,328. 328. Plantas herbáceas anuales ó vivaces, de caña derecha ó es- tendida por el suelo, y hasta rastrera algunas veces, con hojas sim- ples, alternas, envainadoras, con la vaina abierta, triquetrasy algo cortantes, punzantes ó llanas y blandas, con la lígula peluda ó des- nuda; panojas flojas ó densas, de gluma uniflora formada de 2 val- vas, cuya esterior se termina por una arista, lampiña ; estigmas lonjitudinalmente peiierizados ó plumosos : agrostis, F. 10, T. YIII. 329. Gluma cuya valva inferior lleva una arista muy poco pro- nunciada, 330. — Pajita esterior provista de una arista bastante larga y torcida; yerbas anuales, de hojas alternas, envainadoras, lanceoladas, bastante largas; flores en panojas ó en espigas forma- das de una gluma con 2 valvas, multíflora, glumela, bivalva, sin arista, pajita esterior con una arista torcida situada por su dorso : avena, F. 10, T. IV. 330. Espigas sencillas ó algo compuestas; vaina abierta, 331.. — Espigas compuestas ó sencillas; vaina cerrada, 338. 331. Eje de las espiguitas con pelo, 332. — Eje de las espiguitas sin pelo, 333. 332. Yerbas anuales ó vivaces, á veces muy altas y con caña le- ñosa, pero ordinariamente de tamaño regular ó pequeñas, con hojas alternas, simples, envainadoras, de vaina abierta, lanceoladas y mas ó menos grandes y largas. Gluma con 2 valvas conteniendo algunas flores; eje de las espiguitas con algunos pelos que envuelven la glu- mela, provista de algunos pelos interiormente : arundo, F. 10, T. IX. 333. Gluma con 2 valvas; flores unilaterales, 334. — Gluma con 3 valvas, cuya tercera está por la parte esterior de las flores y pa- rece así como sobreañadida, 337. 334. Espiguitas largas y delgadas saliendo por debajo de una bráctea y formando por su reunión una especie de escoba, 335. — Espiguitas bastante largas, delgadas también, pero no tanto, sin bráctea, mas ó menos estendidas y dispuestas á manera de los dedos de la mano, 336. 335. Yerbecita á veces rastrera, cuya gluma contiene algunas VEJETALES HERMAFEODITOS APÉTALOS. 239 flores; glumela de 2 valvas lanceolado-lineares j muticas : ci/nosu- ms, F. 10, T. XII. 336. Yerbas pequeñas como de 6" á 32" de alto, con hojas alter- nas, envainadoras, lanceolado-lineares; gluma comprimida, con 2 valvas desiguales, puntiagudas y aquiladas, cuya mayor contiene 3 flores ; glumela con 2 valvas agudas y también aquiladas : dactvlis, F. 10, T. XII. 337. Yerbas anuales de tamaño variado, cuya caña llena se eleva á veces á 3' ó 4' de altura, terminada por una espiga apanojada, tan pronto densa como floja, cuyas flores están frecuentemente provis- tas por la base de una especie de involucro con aristas ó barbas bas- tante largas; valvas déla gluma también á veces aristadas; glumela de 2 valvas persistentes envolviendo la semilla y haciéndola como una capa crustácea : j^;í^?¿¿c?ím, F. 10, T. III. 338. Glumas 4, dísticamente imbricadas; flores diandras, 339. — Nunca 4 glumas ni flores diandras tampoco, 340. 339. Yerba vivaz cuya caña, delgada y alta de como 6 á 8", sale de un rizoma delgado, bastante largo y escamoso; hojas bastante tiesas, lanceolado-lineares, envainadoras, radicales ó alternas, mas cortas que la cañita; flores en espigas redondeaditas ú oblongas y sentadas, á veces con una especie de involucro trífllo y mas largo que la cabezuela, ó en especie de umbela formada de espiguitas apretadas é imbricadas; espiguitas unifloras; gluma con dos valvas desiguales estriadas y pestañosas ; glumela también bivalva y ma- yor; estilo bífido, aquenio lenticular: liyllingia, F. 11, T. III. 340. Espigas comprimidas mas ó menos largas y dispuestas á ma- nera de umbela en el ápice de una caña triangular mas ó menos lar- ga, acompañadas de un involucro situado en su ápice, cuyas hojas, ordinariamente en número de 3, son mas ó menos largas, 341. — Espidas cortas mas ó menos redondeadas y como en cabezuela, 342. 341. Yerbas mas ó menos grandes, vivaces y cuyo tallo triangu- lar mas ó menos largo sale de ordinario de un rizoma mas ó menos desarrollado y á veces con tubérculos; hojas radicales ó alternas, lanceoladas, mas ó menos largas y ásperas, de vajina siempre cer- rada, cuyos bordes aserraditos son muy cortantes algunas veces. Involucro formado de una ó de algunas hojas florales; espigas ama- rillentas, delgadas, mas ó menos largas, mas ó menos pedunculadas, mas ó menos estendidas, mas ó menos numerosas, con eí^camas dís- ticas é imbricadas á la vez, en cuya axila está la flor que consta de 3 estambres y de un ovario unilocular, monospermo, de cuyo ápice sale un estilo con 3 estigmas; aquenio desnudo: ciperícs, F. 11, T. IX. 342. Semillas enteramente desnudas ó á veces acompañadas de cerdas; escamas fasciculadas cuyas esteriores blanquecinas son es- tériles, 343. — Semillas desnudas, envueltas en pelos ó en cerdas; escamas imbricadas por todos lados y todas fértiles ; yerbas siempre de los lugares inundados ó pantanosos, de caña cilindrica, desnuda, larga de 1 1^2' á 2', torulosa, tabicada interiormente y hueca por consiguiente; hojas todas radicales, cilindricas, cónicas, lustrosas y lampiñas, diferenciándose de la caña solo por no terminarse por una 240 MÉTODO DICOTÓMICO. cabezuela ovoidea; especie de espiga densa mas ó menos pardusca, formada de espiguitas un poco desarrolladas j agudas, cuyas flores constan de 3 estambres saliendo de la axila de una escama y de un ovario casi esférico, unilocular, monospermo y de cuyo ápice sale un estilo terminado por 3 estigmas; aquenio: scirpus, F. 11, T. YIII. 343. Yerbas también de los lugares húmedos, de caña sin ó con hojas simples, linear-lanceolodas, alternas, las mas veces radicales todas, envainadoras, con la vaina cerrada. Flores en espiguitas re- unidas en cabezuela ó fasciculadas, formando espigas ó panojas, uni ó paucífloras, con paleas ó pajitas dísticas, de varios modos imbri- cadas ; estambres 3; ovario con estilo 3-fido, simple por la base, pi- ramidal ó bulbosa, engrosada y decidua; cariópside trígona, mutica ó mucronadita : schcenus, F. 11, T. VIH. 344. De ovario libre ó supero, 345. — De ovario infero ó adhe- rente, 419. 345. Siempre único ó solitario, 346. — Nunca jamás único, pero en número variable, 417. 346. Estambres en número constante v determinado ó variable, 347. — Estambres indeterminados ó mas numerosos por consi- guiente, 415. 347. En número siempre constante y determinado, 388. — En número variable, sea por causa de aborto ú otra, 348. 348. Fruto drupáceo ó abayado, 349. — Fruto nunca drupáceo, 363. 349. Fruto drupáceo, 350. — Fruto abayado ó baya, 361. 350. Flores polígamas, díclines ó unisexuales, 351. — Flores siempre hermafroditas, 353. 351. Hermafroditas ó polígamas, 352. — Hermafroditas ordina- riamente, pero algunas raras veces dioicas ó unisexuales, 357. 352. Arboles grandes y ramosos, de hojas alternas, simples, pe- cioladas, con 3 nervaduras pronunciadas por la cara inferior, lustro- sas, lampiñas, coriáceas, aromáticas y enteras. Flores amanojado- apanojadas y terminales, constando de un periantio 6-partido, de limbo deciduo y con la base persistente ; estambres fértiles 9, cuyas anteras son 4-loculares. Drupa sostenida por una cúpula endure- • cida, 6-fida ó sub-truncada: cÁnnamomum , F. 46, T. III. 353. Anteras con 2 ó con 4 celdillas, 354. — Anteras siempre 4- loculares, 359. 354. Anteras con 2 ó 4 celdillas, 355. — Anteras biloculares so- lamente, 357. 355. Limbo calizinal siempre persistente; hay glándulas estami- niformes, 356. — Limbo calizinal persistente ó caduco y articulado; flores con ó sin glándulas estaminiformes; anteras de los estambres interiores estrorsas; fruto seco ó carnudo y encerrado en el tubo calizinal vuelto carnoso ó endurecido : árboles con hojas simples, alternas, pecioladas, peninervias, coriáceas; yemas con escamas foliáceas aquiladas; inflorescencia apanojada, axilar ó sub-termi- nal, flojita y algunas veces flexuosa : criptocarya, F. 46, T. IV. 356. Árbol grande, corpulento, alto y coposo, cuyas ramitas y panojas son pubescentes; hojas alternas, simples, pecioladas, aova- VEJETALES HERMAFRODITOS APÉTALOS. 241 das Ó aovado-lonceoladas, de cara superior lustrosa, mientras la in- ferior es pubescentita ó alampiñada, largas de 3" y anchas de 21 {2, coriáceas, con las nervaduras bastante proeminentes inferiormente j cuja parte mas inferior es opuesta j distante de 2"'-3'" de la base; flores fasciculadas, apanojadas, con pedículos tan largos como ellas, de periantio 6-partido y enteramente persistente, largo de Y" ; es- tambres fértiles 9, de anteras oblongas y tan largas como los fila- mentos, cuyos 3 de la serie interna son biglandulosos por la base j tan largos como los estambres estériles , pubescentitos y oblongos ; drupa elipsoídeo-oblonga, obtusa, larga de 6'" y ancha de 3'" , y mu- cho mas larga que la cápsula abierta que la sostiene y que proviene del cáliz endurecido, alta de Y" y escondiendo el pedicelo turbina- do ; pAcehe, F. 46, T. III. 357. Tres estambres fértiles contiguos, cuyas anteras subsesiles se abren por 2 ventallas terminales ; drupa sostenida por una cúpula truncada, 358. — 9 estambres fértiles, periantio de limbo 6-partido y tardíamente deciduo y desprendiéndose del tubo persistente : ár- boles altos ó medianos, mas ó menos corpulentos y coposos, cuyas ramitas son alampiñadas, tomentosas ó pulverulento-sedosas, así como las panojas; hojas simples, alternas, pecioladas, cartáceas ó coriáceas, enteras, lanceolado-oblongas, oblongas ó elípticas, elíp- tico-oblongas, obtusitas ó con una punta, enteramente lampiñas, ó de cara inferior plateado-sub-sedosa, con las nervaduras mas ó me- nos proeminentes, mientras la superior es lustrosa y mas ó menos lisa; flores en haces apanojados; drupa sostenida por una cúpula troncada: aydeíidron, F. 46, T. V. 358. Arboles mas ó menos grandes, altos ó medianos, lampiños ó pubescentes, con hojas alternas, simples, pecioladas, enteras, co- riáceas, con las nervaduras arqueadas, lanceoladas, oblongas, elíp- ticas, lanceolado-oblongas ó elíptico-oblongas, aguzadas, con una punta mas ó menos obtusa, de cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior, lampiña, alampiñada ó sedosa, tiene las nerva- duras bastante pronunciadas y las venas con frecuencia dispuestas en redecilla; flores fasciculadas y dispuestas en panoja, constando de un periantio 6-fido ó 6-dentado, de limbo deciduo : acroclidium, F. 46, T. V. 359. Yemas de las ramitas incompletas, 360. — Yemas de las ramitas completas: árboles grandes y altos, ó medianos, mas ó me- nos corpulentos y coposos, de ramitas purpúreas, parduscas ó ver- des, lampiñas ó pubescentes, con hojas cartáceas ó coriáceas, sim- ples, alternas, pecioladas, lanceoladas, lanceolado-oblongas, lampiñas ó alampiñadas, de cara superior lustrosa, mientras la inferior, lam- piña ó alampiñada, tiene barba en la axila de las nervaduras, dis- puestas en redecilla; flores amanojado-apanojadas, de periantie 6-partido y enrodado; 9 estambres fértiles, á veces 3 tienen 2 glándulas por la base del filamento; anteras anchas subsesiles: drupa sostenida por una cúpula troncada : nectandra, F. 46, T. 1. 360. Arboles con hojas simples, alternas, triplinervias; fiores en panojas pequeñas sub-tricótomas y sin involucro, formadas de un periantio cartáceo 6-fido, cuyo limbo es deciduo; estambres dispues- TOMO I 16 242 MÉTODO DICOTÓMICO. tos en 4 series, de los cuales 9 estemos son fértiles, mientras los 6 mas internos son estériles; los 3 mas interiores fértiles tienen la base estipitacla por estaminocles apareados y estipitados; los déla 1» y 2^ serie tienen las anteras introrsas, mientras las de la 3^ son estrorsas, y todas aovadas, cuadriloculares y dehiscentf s por tantas valvas ascendentes; ovario iinilocular, uniovulado, con un estigma discoideo; drupa sentada en la base obcónica y entera del periantio: camphora, F. 46, T. II. 361. Arbu¿tillos cuyo ovario es formado de un solo carpillo uni- locular, 362. — Matas herbáceas ó fruticosas, cuyo ovario es for- mado de algunos 20, 10 carpillos formando una baya única; estam- bres 8, 10, 12, 20 casi períjinos; tallo herbáceo ó fruticoso saliendo de una raiz carnada bastante gruesa, ramoso superiormente y alto de 4' á 6', asurcado ó estriado, lampiño ; hojas alternas, simples, grandes, elípticas ó elíptico-lanceoladas, aovadas ó aovado-lanceo- ladas, con una punta ó cortamente aguzadas, pecioladas y sin et^tí- pulas, lampiñas y lustrosas; flores pequeñas amarillento- blanqueci- nas ó rojizo-blancuzcas, pediceladas, dispuestas en espigas mas ó menos racimosas, pedunculadas, delgadas y largas de 3" á 4" y de periantio 5-partido coroliforme. Baya asurcada, redondo -achatada, plurilocular, de color purpúreo casi prieto, carpelos uniloculares, cuya semilla contiene un embrión anular ciñendo el endospermo : pliytolacea, F. 54, S.-O. III, T. II. 362. Arbustillos de tallo delgado, ramoso, altos de 6'-10'-15'', con las ramitas herbáceas, lampiñas ó pubescentes, de hojas aovadas, elípticas ó elíptico-lanceoladas, con una punta, lamy)iñas ó á veces pubescentes, pecioladas, con estípulas. Flores pediceladas, peque- ñas, rojizo-blancuzcas ó blanquecinas solamente, en racimos ter- minales ó laterales pedunculados, con los pedicelos acompañados de una bráctea mas ó menos decidua situada por la base ó por enci- ma de ella; de periantio petaloídeo 4-partido; 4, 8, 12 estambres casi hipójinos, alternos con los segmentos calizinales, cuyas anteras son aovadas é introrsas ó aflechadas y estrorsas; pistilo formado de un ovario casi esférico, unilocular, cuyo óvulo único es basilar, de su ápice sale un estilo oblicuo y corto que suele faltar, terminado por un estigma cabezudo á veces sentado. Baya pequeña largamente pedicelada, globosa, roja ó purpúreo-negrusca y lustrosa; semilla con el embrión anular ciñendo el endospermo : riviiia, F. 54, S.-O. I, T. II. 363. Fruto capsular ó no capsular, pero nunca una legumbre, 383. — Siempre una legumbre lejítima, 364. 364. Estambres muchos ó en número definido á la vez, 367. — Estambres siempre en número definido, pero mas ó menos varia- bles, 365. 365. Cuyas anteras están provistas de una glándula, 366. — De anteras siempre sin glándula. (Véase núm. 280.) 366. Estambres 5, 15, de los cuales algunos abortan siempre, quedándose los filamentos estériles, monadelfos y esertos, n. 277. — Estambres 10, 8 libres no esertos, todos fértiles; glándula de la antera terminal y estipitada, n. 276. VEJETALES HERMAFEODITOS APÉTALOS. 243 367. En número indefinido y definido á la vez, 3G8. — Siempre muchos é indefinidos por consiguiente, 370. 368. Libres, muchos ó 10, de anteras globosas, cuyo polen es compuesto, n. 200. — Monadelfos, 369. 369. Muchos 8, 10, 15, 20, 40, legumbre bivalvo y abriéndose con elasticidad, siempre recta, n. 290. — Muchos ó 10, legumbre indehiscente, con pulpa, comprimida, ancha y doblada en arco casi completo, según sus bordes, n. 285. 370. Siempre monadelfos, 371. — Sub-distintos; legumhre hin- chada, sub-cilíndrica ó espesito-comprimida, con alguna pulpa in- teriormente, n. 288. 371. Legumbre dehiscente torcida ó dispuesta á manera de cara- col, n.287. — Legumbre indehiscente reventándose desigualmen- te, mas ó menos recta, con semillas siempre envueltas en un arilo pulposo, n. 286. 372. Fruto capsular, 373. — Fruto no capsular, pero un aquenio á veces envuelto en el cáliz vuelto ó no carnudo, 383. 373. Arboles ó arbustos, 374. — Vejetales subfruticosos y frúti- ces ó plantas herbáceas, 375. 374. Con hojas simples, alternas, lampiñas ó alampiñadas, elípti- cas, aovadas, lanceoladas, elíptico-lanceoladas, oblongo-lanceola- das, enterase mas veces aserradas, y provistas de líneas y de puntos transparentes, persistentes y siempre verdes ó deciduas, pecioladas y con estípulas. Flores pequeñas en hacecillos axilares ó en corim- bos y de periantio 5, 4-ipartido y raras veces 5-fido, coroliforme y marcescente, con los segmentos imbricados; estambres distintos 8, 10, 15, insertos sobre un disco perijínico alternando con escamas ve- lludas; anteras redondeaditas; ovario unilocular con 3 ó 4 placen- tas, de cuyo ápice sale un estilo simple terminado por un estigma cabezudo, ó trífido con igual esti.ííma en cada brazo. Semillas pro- vistas de un arilo : casearia, F. 87, T. III. 375. Plantas herbáceas, 376. — Arbustitosó vejetales sub-frutico- sos, altos de 4' á 9' , no muy ramosos, lechosos: en efecto, por las heridas dejan salir una leche amarilla; de hojas grandes, alternas, simples, pecioladas, largas de 6"-18" y anchas de 4 l|2-5", oval- oblongas, sinuoso-pinatífidas, cuyas superiores son á veces casi en- teras, de cara inferior algo glauca; flores en panojas terminales largas de como l'-l 1|2', flojas y de cáliz con 2 sépalos coriáceos, cóncavos y caducos; 8, 24 estambres hipójinos ; ovario formado de 2 carpelos, con 2 estigmas ojouestos á las placentas. Cápsula unilocu- lar, bivalvo por la base, con las placentas situadas entre las valvas, filiformes y reunidas por el ápice ; semilla solitaria erguida : bocco- nia, F. 90. 276. Pericarpio utricular, 377. — Fruta capsular lejítima, 379. 377. Estambres 5, 4, reunidos por la base, de anteras biloculares, y alternos con los apéndices de la cúpula, 378. — Estambres 3, 5, monadelfos, de anteras uniloculares y ovales, alternos con los dien- tes de lacúpula que á veces es entera; yerbas ordinariamente viva- ces y aveces anuales, lampiñas, alampiñadas ó pubescentes, de ta- llos rastreros ó arraigantes, muy ramosos y de vértice mas ó menos 244 MÉTODO DICOTÓMICO. ascendente; hojas opuestas, simples, bien enteras, aguzadas por la base, ob-aovado -lanceoladas ó lanceoladas, elíptico -lanceoladas, ob-lanceoladas, ovales ú ob-aovadas, cortamente pecioladas. Flores en cabezas sub-globosas, comunmente sésiles, axilares o terminales, de periantio con 5 sépalos; 3, 5 estambres; ovario unilocular, cuyo estigma es sub-sentado y cabezudo ó sub-escotado, retrículo-ob- acorazonado, marjinado por la parte superior y escediendo la semi- lla : alternantliera, F. 55, T. I. 378. Planta mas ó menos fruticulosa, peluda ó alampiñada, cuyos ramos mas ó menos tetrágonos llevan hojas simples, opuestas, pe- cioladas, aovadas ó redondeadas, aguzadas ú ob-aovado-sub-redon- das, mucronaditas. Flores verduscas, subsesiles, ordinariamente dispuestas en espigas simples y alargadas y por fin reñexas, carti- lajinosas, largas de 13'"-12"', cuyas brácteas son comunmente mem- branosas por la márjen y provistas de una costilla espinosa y de un periantio con 5, 4 sépalos 3" tantos estambres; ovario unilocular con un óvulo único y de cuyo ápice sale un estilo simple terminado por un estigma cabezudo, achyraiithes, F. 55, T. I. 379. Un pixidio ; estambres períjinos, 380. — Una cápsula, estam- bres hipójinos, 382. 380. Flores solitarias semi-engastadas en la axila envainadora de las hojas y cuyo periantio 5-partido y colorado interiormente tiene sus divisiones mucronadas por debajo del ápice, 381. — Flo- res también solitarias y axilares, pero pedunculadas, de periantio 5-partido, campaniforme, petaloídeo, persistente, colorado ordina- riamente}' aveces blanco interiormente; yerbecita vivaz muy bo- nita y que se cria en los sanitrales y en las orillas del mar, de ta- llito algo carnudo, cilindrico, lampiño, delgado, largo de 6"" á 8", estendido en el suelo y como rastrero, mas ó menos ramoso; hojas opuestas, simples, entejérrimas, algo carnosas, casi sentadas, agu- zadas por la base algo envainadora, lanceoladas ó lanceolado-oblon- gas, de un color yerde teñido de morado; tiores con 5, 15, 30 estam- bres insertos en el tubo calizinal muy corto; ovario sentado con 3, 5 celdillas conteniendo algunos óvulos, cuyo ápice lleva 3, 5, 6 es- tilos; pixidio 3, 5-locular polispermo, con el eje placentario persis- tente : sesuviiim, F. 148, T. IV. 381. Yerba vivaz, lampiña, cuyo tallo suculento, rastrero ó es- tendido por el suelo y largo de r-2-3', es iñuj ramoso; hojas sim- ples, opuestas, bastante espesas y suculentas, cuya base del peciolo corto se dilata en vajina, ordinariamente una es menor en las pa- res, redondeadito-ob-aovadas, largas de 1 \\l á 2" sobre 12 á 15'" de ancho; flores pequeñas axilares 3^ agrupadas ó sub-solitarias, con 10, 5, 20 estambres, cuyos esteriores alternan con los segmentos calizinales; ovario con dos celdillas 3, 4-ovuladas, de cuyo ápice sa- len 2, 1 estilos con estigma cabezudo. Cápsula ó pixidio con 6, 8 semillas cubiertas por líneas lameliformes, de opérculo cóncavo por el ápice y con dientes obtusitos por la márjen, endurecido é incom- pletamente cerrado por la base del pixidio; es persistente y mem- branoso : trianthema, F. 148, T. IV. 382. Cápsula trilocular, loculícida, trivalve y con algunas semi- VEJETALES HERMAFRODITOS APÉTALOS. . 245 lias lisas 3, 5-coí?tilla(las Ó granujientas. Yerbas anuales, altas de 6" a 10", de tallo ramosísimo derecho y nudoso, lampiñas, con ho- jas espatuladas ú ob-lanceoladas, ó espatulado-oblongas, simples y como verticiladas en cada nudo ó solamente en el mas inferior; flo- res pequeñas, con pedicelos filiformes unifloros, dispuestos á manera de umbela ó en panojas corimbiformes, j de periantio 5-partido, coloreado interiormente con 2, 3, 5 estaml)res ; ovario 3-locular, con algunos óvulos y de cuyo ápice salen 3 estilos con su corres- pondiente estigma cada uno : ¡oharnaceum , ^v7.]molhcgo, L., F. 148, T. III. 383. Flores nunca agrupadas, como en cabezuela ; aquenios nunca marjinados ni escamiformes tampoco ; plantas siempre herbáceas, 3S3 bis. — Flores pequeñas herrumbroi^as agrupadas como en ca- bezuelas pedunculadas; aquenios marjinados escamiformes á la par. Arboles bajitos ó arbustos de la costa y muy ramosos; hojas alter- nas, simples, pecioladas, lanceoladas ó elípticas, de ordinario con 2 glándulas por la márjen y hacia la base, lampiñas ó sedosas. Flores pequeñas cuyas cabezuelas están en racimos ó panojas, de cáliz con el limbo 5-fido y deciduo, cuyo tubo no se estiende sobre el ovario unilocular, cuyos óvulos mellizos y colgantes de la celda son aná- tropos, de estilo filiforme con estigma agudo; estambres peiijínicos 5, 10, biseriados, insertos en el limbo calizinal, esertos, con las an- teras biloculares y lonjitudinalmente dehiscentes. Aquenios imbrica- dos, cimbiformes, redondeaditos, cóncavos y aquillados por arriba, convexos inferiormente y agudos por la márjen : conocarptcSy F. 139, T. II, G. IV. 383 bis. Aquenio mas ó menos libre del cáliz, 384. — Aquenio contenido en el cáliz acrescente, vuelto ó no carnudo, que le hace parecer uña cápsula ó una drupa, 386. 384. Aquenio casi enteramente desnudo y fuera del perigonio, con 2 ó 4 ganchitos terminales, uno en cada ángulo y doblados hacia abajo, 385. — Aquenio triangular ó biconvexo mas ó menos escon- dido por el cáliz marcescente ; plantas herbáceas anuales ó bisanua- les y hasta vivaces, de tallo cilindrico, á veces estriado, mas ó me- nos ramoso, alto de 1' á 2', algunas veces mas largo, lampiño ó pubescente, derecho ó divaricado ; hojas simples, alternas, lanceo- ladas, oblongo-lanceoladas, aguzadas por la base, cuyo peciolo mas ó menos corto está acompañado por la base de una estípula membra- nosa envainadora llamada ocrea, mas ó menos tubulosa, pestañosa, cerdosa ó desnuda y entera; flores pequeñas blancas ó rosaditas, en racimaos espiciformes terminales ó axilares, solitarios ó mellizos, de pedicelo articulado y de periantio petaloídeo, 5, 3-partido y mar- cescente; estambres 8, 7, 4, de filamentos cortos y subulados; ova- rio redondeado ó triangular, unilocular y uniovulado, de cuj'o ápice salen 3, 2 estilos muy cortos y filiformes terminados por un estigma sencillo. Aquenio mas ó menos lustroso, prieto, conteniendo un em- brjon arqueado en rededor de un lado del endospermo \polygoimm, F. 50, S.-O. IV, T. II, S.-T. III, G. I. 385. Mata sub-fruticosa de tallo derecho, poco ramoso, alto de 2'-3'-4', pubescente, con hojas simples, alternas, cortamente pecio- 246 . MÉTODO DICOTÓMICO. ladas, elípticas, oblongas ú oblongo-lanceoladas, ásperas por los bor- des, puntiagudas y enteras, glandulosas liácia el peciolo también glancluloso y pubescentes, lampiñas, acompañadas por dos estípulas pequeñas, cilíndrico-subuladas, carnositas y pronto caducas. Flores pequeñas blancas, á veces algo teñidas de color de rosa, unilatera- les y en espigas largas y delgadas, axilares y de ordinario termina- les, algunas veces íormando una especie de panoja, porque el eje principal es la prolongación del tallo ó del ramo, de manera que se ramifica, de vértice arqueado bácia el suelo, con muchas flores es- parcidas y mas ó menos distantes las unas de las otras, sentadas y acompañadas de 3 brácteas ; de periantio 4-partido, coroliforme, blanquecino, largo de 2'" y cuyas divisiones son lineares y obtusas; estambres 4, 6, 8, casi períjinos y de anteras asaetadas; ovario pe- queño unilocular con un solo óvulo basilar, algo cuadrangular, de cuyo ápice mas ancho que la base sale un estigma sentado, lateral y apincelado. Aquenio cuadrangular cuya base está acompañada por el cáliz, mientras el vértice, mucho mas grueso, lleva un ganchita por cada ángulo; toda la planta exhala olor de ajo : jiQtiveria, F. 54, S.-O. I, T. I. 386. Aquenio contenido en el cáliz vuelto carnudo, de manera que la fruta parece carnuda, pero visible por el ápice abierto : ár- boles ó arbustos, 387, — Aquenio contenido en el tubo calizinal en- durecido, cuyo ápice se cierra por fin, y así simula una especie de cápsula ; plantas herbáceas anuales ó vivaces y sub-fruticosas, algo trepadoras, de tallos muy ramosos, derechos ó estendidos por el suelo 3^ desparramados, de vértice mas ó menos ascendente, lam- piños ó pubescentes, con nudos mas ó menos pronunciados, de los cuales salen las hojas ordinariamente opuestas, simples, aovadas, aovado-lanceoladas, acorazonado-redondeadas, mas ó menos pun- tiagudas ú obtusas, concólores ó de cara inferior blanquecina, mas ó menos pecioladas ; flores pequeñas blancas ó rojizas, fasciculadas, pediceladas y acompañadas de brácteas diminutas y dispuestas en umbelas ó panojas flojas bastante grandes, axilares ó terminales, y de periantio estrechado por arriba del tubo persifctente, por fin cía- viforme, anguloso, troncado y obtusamente mucronado por el ápice, otras veces redondeado, con 5 estrias ó costillas mas ó menos pro- nunciadas y mas ó menos glandulosas, ó sin ellas, pero en ese caso el ápice es glanduloso, de limbo cortamente 5-lobulado; estambres 1, 3, 4; semilla de embrión conduplicado : hoerluiavia, F. 56, T. I. 387. Arboles bastante grandes ó bajitos y arbustos mas ó menos ramosos, de hojas alternas mas ó menos grandes, coriáceas ó papi- ráceas algunas veces, lampiñas y á veces alampiñadas, mas ó menos, cortamente pecioladas, con una ocrea, acorazonado-orbiculares, re- dondeaditas, aovado-oblongas, anchamente elípticas, oblongo-lan- ceoladas, elípticas ó elíptico-oblongas, mas ó menos obtusas, agu- zadas ó puntiagudas, de base mas ó menos aguzada, acorazonada-o redondeadita, de cara superior lustrosa, lisa o áspera, mientras Ja inferior tiene las nervaduras ordinariamente bien pronunciadas j las venas mas o menos en redecilla, Flores pequeñas blanquecinas ó verdoso-amarillentas, de pedicelo articulado sea por la base, sea. TEJETALES HERMAFRODITOS APÉTALOS. 241 por el ápice, sea con el raquis y saliendo de la axila de una bráctea mas o menos diminuta o á veces sentadas, dispuestas en racimos o en espigas mas o menos largos, axilares ó terminales, y de periantio 5-fido o 5-partido, queee vuelve por fin espeso j carnudo creciendo bastante para envolver el aquenio, sea enteramente, sea por partes solamente ; estambres ordinariamente 8 y á veces 12; ovario unilo- cular, masó menos redondo y de cuyo ápice salen 3 estilos; embrión axil, recto v alojado en un endospermo, ruminado : CGCColoha, F. 50, S.-O. Y, T: II, S.-T. V, G. II. 388. Fruto mas ó menos carnudo, 388 bis. — Fruto siempre seco, 390 dis. 388 Ms. Fruto abayado; 5 estambres liipójinos; plantas herbá- ceas, 389 Ms. — Fruto drupáceo ; estambres 8, 10 hipojínicos ó pe- rijínicos; árboles mas ó menos altos, 389. • 389. Estambres 8 hipojínicos; liber que se puede desenvolver en capas delgaditas que parecen encaje, 390. — Estambres perijínicos 10, desiguales y cuyos 5 mas largos se insertan mas arriba; árboles de 30' á 60' y mas de altura, muy ramosos y bastante corpulentos, cuyo liber es compacto, de hojas, simples, alternas, pecioladas, apro- ximadas hacia el vértice de las ramitas, ob-aovadas ó espatulado- lanceoladas, de cara superior lampiña, mientras la inferior es sedosa ó alam pinada, espatuladas ú ob-ao vado-oblongas, lampiñas supe- riormente y alampiñadas inferiormente, con vello herrumbroso persistente y situado por la costilla y márjen, enteras y obtusas. Flores pequeñas verdosas en espigas axilares mas ó menos pedun- culadas, cilindricas ú aovadas, de cáliz con el limbo acubileteado, diminutamente 5-dentado, persistente ó tardíamente deciduo; algu- nas raras veces las flores se trasforman en un cuerpo largo, cilin- drico y arqueado; estambres mas ó menos esertos , biseriados inser- tos en el fondo del cáliz, de anteras sub-globoso-dídimas , lonjitudi- nalmente dehiscentes. Ovario unilocular, con 3 óvulos colgantes del ápice de la celdilla y anátropos, de estilo alesnado, agudo y termi- nado por un estigma simple. Drupa casi seca, pequeña, aovado- cónica ú ovoidea, coronada por el limbo persistente del cáliz ó des- provista de él. Semilla de embrión sin endospermo y con cotiledones foliáceos y convólutos : lucida, F. 139, T. II, G. II. 389 ¿¿ó\ Flores solitarias, pediceladas, de periantio cordiforme y con 6 estambres; hojas capilares, fasciculadas y esparcidas ; un rizoma de donde salen turiones que se vuelven un tallo derecho; baya piniforme roja, 246.^-Flores nunca solitarias, pero en espigas sentadas en un eje grueso, carnudo y cilindrico y saliendo de la axila de una bráctea espesa y suculenta bastante grande. Plantas herbáceas, de tallo muy largo ordinariamente, muy ramoso, enre- dadero y trepador, mas ó menos delgado, con hojas alternas, sim- ples, pecioladas, enteras, mas ó menos grandes, oval-redondeadas ó lanceoladas, mas ó menos puntiagudas, lampiñas, verdes ó rojas, bastante espesas y suculentas; flores blancas, rosaditas ó teñidas de rosado; de periantio suculento I-partido, cuyas divisiones cóncavas mas o menos puntiagudas son bastante carnosas; estambres 5; ova- rio casi esférico, unilocular, de cuyo ápice sale un estilo muy corto 248 SJÉTODO DICOTÓMICO. tripartido 6 con 3 estigmas largos j lineares. Baya globoso-acliata- da, etiriada, lustrosa, negra 3' pegada en el eje déla espiga; semilla única: dasella, F. 53, S.-O. I. 390. Árbol de 25 á 30' de altura, muy rafaioso y poco corpulento, cuyo liber está formado de fibras entremezcladas y separables, lam- piño; hojas alternas, simples, pecioladas, anchamente aovadas, en- teras, con una punta, collamente pecioladas, siempre verdes y lar- gas de 3-5". Flores pequeñas blanquecinas, en espigas flojas y sin brácteas, de cáliz campanudo, et-peso y4-dentado. Ovario peli- erizado, prokngi(ndcse en un estilo terminal, corto, que lleva un estigma troncado. Drupa envuelta en el periantio abayado y vellu- do, con 1, 3 huCíLOS crustáceos y frájiles, cuyas semillas en número de 1, 3 son inversas; embrión ortótropo sin endospermo, con los coti- ledones plano -convexos y la radícula corta y supera : lagetta, F. 49, G. 1. 390 lis. Una legumbre mas ó menos lejítima, 391. — Fruto cap- sular ó utricular, 397. 391. Legumbre no muy lejítima ; 10 estambrc-s distintos, 392. — Legumbre lejítima, 394. 392. Periantio colorido y 5-partido, ceñida la base por un invo- lucro diminuto lijeramente bilobulado, 393. — Cáliz colorido 4- partido y sin involucro alguno : árbol resinoso muy alto, ramoso y corpulento, de hojas paripinadas, con 5, 1 pares de hojuelas coriá- ceas, ine-quilaterales, oblicuamente aovadas, con una punta obtusita, lampiñas, con puntitos transparentes, de ordinario alternas y largas de 3"-!": una de las mas superiores aborta frecuentemente. Flores blancuzcas con racimos compuestos y espiciformes, terminales; pe- riantio campanudo de divisiones imbricadas, algo desiguales, abier- tas y diverjentes; estambres inclinados distintos; ovario redondea- do y comprimido á la vez, con 2 óvulos, de cuj^o ápice sale un estilo terminado por un estigma entero. Legumbre estipitada, oblicua- mente ovoidea, coriácea, bivalve y monosperma, inequilateral, con una punta obtusita, lampiña y provista de puntos transparentes, con una semilla única provista de un arilo lateral carpóforo muy corto : copaifera, F. 130, S.-T. II, T. VIL 393. Árbol muy grande, alto, corpulento, coposo j de ramos es- tendidos, lampiño ; hojas siempre verdes y coriáceas, pinadas y for- madas de 4, 2 pares de hojuelas oblicuamente elípticas ó eliptical- oblougas, pecioladas, obtusitas, de cara inferior con las venitas en redecilla, lampiñas y con puntos transparentes, largas de 6"-4", y anchas de 4"-2". Flores en panojas terminales, ordinariamente lar- gas de L, interrumpidas y formadas de espigas subsesiles, alternas, distantes de como 4"'-6'" las unas de las otras v laraas de 4"-2"; tales flores agrupadas y solitarias salen de la axila de una bráctca diminuta y redondita y constan de un involucro mas largo que la bráctea, de 1|3'", con lo^i lóbulos redondeados ó sub-troncados; tubo calizinal turbinado mas largo quo el involucro, segmentos calizina- les ovales, pefctañotos, iguales, imbricados, largos de V" y mitad menos que los filamentos peludos é iguales, cuyas anteras incum- bentes, oval-oblongas y de celdillas distintas son arqueadas; ovario YEJETALES HEEMAFEODITOS APÉTALOS. 249 peludo sentado en la parte superior del tubo calizinal, lleno por el disco, perijínico, oblicuamente oval, 1{3 tan largo como el estilo filiforme y terminado por un estigma diminuto, unilocular y con un solo óvulo horaótropo j colgando de la parte superior de la sutura : prioria, F. 130, S.-F. 2, T. YII. 394. Estambres cuyas anteras están provistas de una glándula, 395. — Estambres de anteras sin glándula, n. 281. 395. Glándula constante, 396. — Glándula no constante, pero las mas veces. (Véase n. 280.) 396. Legumbre comprimida, muy larga y bastante ancha, sepa- rándose por artejos articulados por la márjen, quedándose entera y persistente, n. 2^5 bis. — Legumbre anchamente linear, plana y com- primida, bivalvo, no separándose nunca por artejos, n. 2*75. 397. Fruto utricular ó capsular, 401. — Fruto ni utricular ni capsular tampoco, 398. 398. Aquenio libre en el fondo del cáliz- que lo tiene encerrado y no simula nunca una cápsula, 400. — Aquenio contenido en el tubo calizinal persistente, endurecido y simulando así una cápsula, 399. 399. Primorosas plantas herbáceas cuyos tallos muy ramosos, nu- dosos y lampiños salen de una raiz napiforme, carnosa, mas ó menos desarrollada; ramos dicótomos y como articulados; hojas simples, de ordinario opuestas, enteras, pecioladas, aovadas ó sub-acorazo- nadas, ovalo-lanceoladas, puntiagudas, largas de 3" á 3 1|2" sobre 1 1|2 á 2" de ancho; flores fasciculado-terminales moradas, amari- llas, blancas y disciplinadas, bastante grandes y formadas de un periantio cordiforme ó tubuloso, de limbo con 5 pliegues y tantos ángulos correspondientes, de base y tubo persistente, envuelto en un involucro unifloro y 5-lobulado mucho mas corto que el tubo; estambres 5 salientes y cuyos filamentos largos pegados á lo largo de la parte interna del tubo se insertan con el cáliz á un disco. Ova- rio sentado sobre el disco, unilocular y con un solo óvulo basilar, de cu3'o ápice sale un estilo capilar cilindrico mas largo que los es- tambres y que se termina por un estigma simple y capitado. Aque- nio de tamaño regular ovoideo, truncado por el ápice, asurcado ó áspero, negro, cuya semilla tiene un endospermo grueso, feculento y central, con el embrión corvo y escéntrico : mirabilis, F. 56, T. IL 400. Periantio de 6 segmentos membranosos, desiguales, mas ó menos conniventes; estambres 6; estigmas 3. Plantas herbáceas cuya base del peciolo está acompañada de una ocrea; flores en pa- nojas terminales; embrión no anular, n. 247. — Periantio 5, 3-par- tido, cuyos segmentos son membranosos por la márjen y con fre- cuencia aquila,dos, no conniventes é iguales ; estambres 5, de filamentos alesnados, opuestos á las divisiones perigoniales y casi tan largos como ellas é insertos por debajo del ovario globoso, algo deprimido y de cuyo ápice sale un estilo muy corto terminado por 2 estigmas lineares y obtusos mas ó menos largos. Aquenio lenticu- lar con endospermo harinoso; embrión completa ó incompletamente anular. Plantas herbáceas anuales ó vivaces, á veces fruticulosas ó leñositas, con tallos ramosos derechos ó desparramados, mas ó me- 250 MÉTODO DICOTÓMICO. nos tendidos, lampiñas, verdosas ó pubescentes, altas de 6-12-18" ó algo mas, hojas simples, alternas, lanceolado-oblongas ó espatula- das, eliptical-oblongas, deltoídeo-aovadas, sinuoso-dentadas ó sola- mente sinuosas, otras Teces desigualmente dentadas sin Cítar si- nuosas, á veces enteras, glandulosas ó no j mas ó menos pecioladas. Flores pequeñas verdes ó verdoso-amarillentas, en grupos dispues- tos en espigas terminales ó axilares, á veces arracimadas ó apano- jadas : clienopodiiim, F. 51, S.-O. I, T. IV, S.-T. V. 401. Fruto utricular, 402. — Fruto capsular, 406. 402. Estambres 5 monadelfos, 403. — Estambres 5 ó 6 libres, 405. 403. Estambres enteramente reunidos, cujeas anteras oblongas alternan con los dientes bipartidos que terminan el tubo calizinal alargadito, 404. — Estambres de anteras oblongas; cúpula basilar corta y sin dientes. Planta herbácea vivaz, de tallos largos, cilin- dricos, acostados sobre el suelo y desparramados, muy ramotos j bastante largos, lampijios, moraduscos, con nuditos arraigantes'; ramitas floríferas ascendentes y derechas, largas de como 6". Hojas simples^ opuestas, enteras, lineares, suculento- carnositas, lampiñas, de cara inferior convexa, mientras la superior es llana y lustrosa, de base aguzada, mientras el ápice obtuso es un poco espatulado ; flores pequeñas, blancas, escariólas, en espiguitas agrupadas y dis- puestas-en cabezuelas sub-giobosas, ó globosas y por íin aovadas ú oblongas, terminales y cuya base está acompañada de hojas ; brác- teas escariosas, aquiladas, conduplicadas, cuyas inferiores e^tán á veces estériles ; periantio con 5 sépalos, cuyos dos interiores son mas estrechos, pero tan largos como los demás, trinervios por de- bajo de su parte media, casi iguales con la bráctea lateral, los cste- riores lampiños ; las nervaduras laterales se juntan con la costillita hacia su .medio; estambres 5 ; estilo bipartido : ^Mloxeriis , F, 55, T. I. 404. Planta herbácea anual pubescente, detallo derecho como de 1 1{2' á 2' de alto, como articulado, de ramos cortos, opucbtos y axilares; hojas simples, opuestas, óvalo-lanceoladas ó lanceolado- oblongas, enteras, pubescentes y verdes ; flores capitadas, formando ordinariamente cabezas globosas, por fin envueltas en pelo, termi- nales y con dos hojas florales situadas por su base, de ordinario so- litarias ; tales flores numerosas rojas ó rosadas secas y escariosas se componen de un periantio petaloídeo persistente formado de 5 divi- siones profundas y uninervias, rodeado por 3 brácteas carenadas j con una ala aserrada y mas largas que el pelo lanudo ; estambres 5 monadelfos; estigmas dos lineares terminando un e&tilo saliendo del ápice del ovario ovoideo y unilocular : gomphrena, F. 55, T. II. 405. Eje de la espiga delgada y no carnosa ; flores pediceladas ; periantio casi caroliforme y 6-partido; estilo 5-fido : planta herbá- cea de tallos larguísimos, ramosísimos, lampiños, verdes ó mora- duscos, enredaderos y saliendo de una raiz perpendicular carnosa y del tamaño del dedo pulgar ó .mas, y vivaz por supuesto ; hojas bas- tante grandes, pecioladas, algo suculentas, óvalo-lanceoladas, un- dulosas por los bordes enteros, de base decurrente en el vértice del peciolo,. bastante largo y de cara superior moradusca y lampiño, YEJETALES HEEMAFEODITOS APÉTALOS. 251 lustroso, así como las hojas. Flores pequeñas verdoso-amarillentas, en espigas simples ó ramosas, delgadas, largas de 3"-2", peduncu- ladas, axilares, á Teces como apanojadas y terminales, cujos pe- dúnculos, mas ó menos morados y lampiños, salen de la axila de una liojita floral; pedicelos cortos, filiformes, rosados, unifloros y saliendo de la axila de una bracteita caduca; un periantio 6-par- tido, un poco campanudo, cuyos segmentos ovales y algo puntiagu- dos son imbricados en la estivacion, dispuestos al abrirse como en dos series y de los cuales uno está algo mas esterior que los demás, casi iguales, marcescentes ; estambres 5 derechos, de filamentos su- bulados y un poco dilatados y comprimidos por la base ; anteras dorfcifijas, oscilantesy transversales, biloculares. Ovario globoso, de cuyo vértice sale un estilo 5-fido, con estigmas glandulosos. Fruto utricular coriáceo y comprimido; semilla basilar, con la te^ta mem- branosa; embrión anular: aiirecleray Juss.; deveiiischia, Nobis, F. 53, S.-Or. 11. 406. Una cápsula lejítima, 409. — Pixidio, 407, 407. PJstambres 4; yerbas siempre sin tallo lejítimo, 408. — Es- tambres 5, con una cúpula basilar corta y sin dientes, plantas her- báceas ó leñositas siempre provistas de un tallo propiamente dicho, alto de l'-2'-3' ; hojas simples, alternas, lanceoladas, aovadas, agu- zadas ó no por la base, lampiñas, mas ó menos pecioladas ; flores en espigas, con brácteas persistentes coloridas; periantio con 5 sépalos mucho mas largos que las brácteas ; ovario ovoideo unilocular y con algunos óvulos, de cuyo vértice sale un estilo corto, terminado por 2 ó 3 estigmas pequeños y recorvados. Semillas verticales lenticu- lares y arriñonadas, de testa crustácea, cuyo endospermo es central y farináceo, y el embrión anular periférico, con la radicula aproxi- mada al hilo : celosía, F. 55, T. II. 408. Plantas herbáceas anuales ó bisanuales sin tallo lejítimo, reemplazado ordinariamente por un bojordo; hojas radicales sim- ples, enteras, basinervias, enteras, mas ó menos óvalo-lanceoladas, largamerjte pecioladas. aguzadas por la base y algo puntiagudas por el ápice. Flores en espiga larga- terminando un pedúnculo largo y axilar, formada de muchas flores pequeñas esparcidas sin orden por la superficie del eje, casi sentadas y saliendo de la axila de una es- cama membranosa; de periantio doble, cuyo esterior ó involucro es 4-partido y cortito, mientras el interior es tubuloso, escamoso y de 4 divisiones dobladas por afuera; 4 estambres, esertos, cuyos fila- mentos muy largos y capilares llevan anteras biloculares; ovario ovoideo, unilocular, con 2 óvulos, de cuyo ápice sale un estilo corto terminada por un eatigma subulado : plcuitago, F. 77. 409. Siempre 6 estambres; periantio mas ó menos petaloideo, con secrmentos soldados ó libres, 411. — Solamente 3 estambres fér- tiles, 410. 410. Plantas herbáceas vivaces ó anuales, cuyos tallos simples ó ramosos, cilindricos, suculentos, nudosos, son rastreros, tendidos por el suelo, desparramados ó rectos ; hojas simples, alternas, basi- nervias, mas ó menos suculentas, lampiñas, sentadas^ envainadoras por la base, de cara superior ordinariamente cóncava y á manera 252 MÉTOEO DICOTÓMICO. de gotera ; flores azules, blancas ó á veces amarillas, en grupos axi- lares ó terminales, envueltas en una especie de espata {'oliácea, formada de dos hojas redondeadas y trabadas; de periantio con 6 divisiones profundas de las cuales 3 son petaloídeas simulando así una corola; tres nectarios cruciformes situados entre los filamentos de los tres estambres estériles; ovario globoso 3-locular y poliovu- lado, de cuyo vértice sale un estilo simple terminado por un estig- ma sencillo ; cápsula casi globosa, trilocular, trivalvo y con muchas semillas : commelina, F. 12. 411. Periantio enteramente petaloídeo, cuyas 6 divisiones mas ó menos profundas son reunidas entre sí por la base. ó á veces libres y simulando petalos, 412. — Periantio cuyas 3 divisiones esteriores menores son verdes y foliáceas, mientras las 3 interiores son peta- loídeas; flores en grupos axilares muy fornidos y encapotadas por una especie de espata foliácea. Plantas herbáceas vivaces, de tallo mas ó menos suculento, con hojas simples, alternas y frecuente- mente dísticas, sentadas y de base algo envainadora, lanceoladas, mas ó menos largas y puntiagudas, de cara superior de ordinario cóncava y á manera de gotera, lampiñas, mas ó menos lustrosas, ordinariamente concolores, ó á veces de dos colores distintos, la cara superior estando verde y la inferior morada. Flores pedicela- das en grupos axilares ó terminales, envueltas cada una en una es- pata particular membranosa y pedicelada, con 6 estambres cuyos filamentos son cubiertos de pelo articulado; ovario globoso trilocu- lar y de cuyo ápice sale un estilo simple alesnado, terminándose en un estigma algo cabezudo y glanduloto; cápsula 3-locular, trivalvo, globosa y polisperma .• tradescantía, F. 12. 412. Raiz bulbosa ó que consiste en una cebolla mas ó menos gruesa, 413 lis. — Raiz nunca bulbosa, pero sí fibrosa siempre, 412 Ms. 412 lis. Plantas terrestres y de los lugares muy secos y arenosos, con las hojas carnosas y arrosetadas, 413. — Plantas herbáceas siempre acuáticas, cuyo tallo recto ó nadante lleva hojas alternas, simples, ovales ó acorazonadas, cuyo peciolo largo es envainador por la base, entejérrimas y con nervaduras paralelas. Flores azules ó azulado-rosaditas primosas, en espigas ó racimos, á veces sub- umbeladas, saliendo del peciolo hendido ó solitarias, cada una es- patáceo-bracteada ; periantio coroliforme persistente, infundibuli->- forme, de tubo anguloso, mas veces encorvado, con el limbo 6-fido, sub-igual ó sub-bilabiado. Estambres desiguales insertos 3 por el ápice y 3 por la base del tubo, ó todos en el vértice pegados. Ovario sub-trígono, 3-locular, de celdillas todas fértiles, multiovuladas, cuyos Óvulos pendientes son anátropos, de estilo -terminal y subula- do, que se termina por un estigma engrosado y apenas trílobo. Cáp- sula veist'da con la base del periantio ó á veces con la misma acres- ciente , trilocular , loculícido-3-valve y polisperma , otras veces unilocular monosperma é indehiscente; semillas aovadas, inversas, de testa papirácea, costillado-estriada. Embrión ortótropo, axil en un endospermo farináceo, cuya radícula engrosada mira al vértice del fruto : pontederia, F. pontederiáceas. VEJETALES HERMA.FRODIT0S APÉTALOS. 253 413. Plantas vivaces herbáceas ó cuyo tallo cortito es sub-leñoso, con hojas grandes radicales ó caulinares, alternas, arrosetadas, á veces dísticas, muy espesas, lanceoladas, lampiñas, á veces aguijo- uosas por los bordes, mas ó menos largas y puntiagudas, glaucas ó no, de cara superior llana, mientras la inferior ó esterna es con- vexa. Flores en espigas largas terminando un bojordo mas ó menos largo, saliendo del centro de las hojas ordinariamente sencillo,' amarillo-anaranjados, derechos antes de abrirse, horizontales du- rante la florescencia y pendientes ó cabizbajos después de la fecun- dación, cuyo pedicelo corto sale de la axila de una bráctea escamosa; de periantio cilindrico, tubuloso, como campanudo, nectarífero por la base, petaloídeo y cuyas 6 divisiones son conniventes por el vér- tice de manera que está casi cerrado, imbricadas y de ápice un poco encorvado por afuera; 6 estambres hipójinos desiguales, un poco esertos y pegados en la base del periantio con que se insertan, de anteras biloculares. Ovario ovoideo, trilocular, poliovulado, cuyo ápice lleva un estilo corto terminado por un estigma trilobulado. Cápsula membranosó-escariosa, de 3 celdillas, cuya dehiscencia lo- culícida se efectúa por 3 valvas, conteniendo cada una bastantes se- millas redondeadas ó ampulosas y dispuestas en dos series : aloes, F. 16-, T. IV. 413 bis. Muchas flores reunidas en el ápice de un bojordo mas ó menos largo y hueco en cabezuelas ó cimas, envueltas antes de la floración por una espala común membranosa que se revienta para que floreen, 414. — Muchas flores dispuestas en espiga floja y ter- minal que ocupa la mitad superior de ün bojordo nunca hueco, mas ó menos -carnoso, á veces escamoso y por lo regular de 6" á r2", nunca envueltas en una espata común. Plantas herbáceas ó vivaces, de bulbos ó cebollas simples, tunicados, mas ó menos desarrollados, con hijos ; hojas radicales, sentadas, largas, estrechas, mas ó me- nos derechas, alternas, envainadoras por la base, ó arrosetadas y mas ó menos estendidas por el suelo, de cuyo centro sale un l)ojordo con flores azules ó de otro color, según las especies, pediceladas y acompañadas por la base del pedicelo de una bráctea como articu- lada y vuelta hacia fuera; de periantio suculento, con 6 divisiones profundas abiertas y dobladas hacia fuera ; estambres 6, de fila- mentos lisos, enteros, subulados y mas ó menos comprimidos por la base, siempre mas cortos que el periantio con que están soldados ; ovario trilocular poliovulado algo trígono y ovoideo á la vez, de cu- yo ápice sale un estilo corto terminado por un estigma pequeño algo trilobulado y glanduloso ; en el vértice del ovario se reparan unas glándulas nectaríferas. Cápsula redondeada y algo trígona á la par, trilocular, polisperma y abriéndose por 3 valvas, de semillas redon- deadas y algo aplanadas, dispuestas en 2 series y con epispermo membranoso : scilla, F. 16, T. lí. 414. Plantas herbáceas vivaces ó bisanuales con bulbos ó cebollas simples, ó compuestos y truncados, sin tallo; hojas raiicaL^s, senci- llas, mas ó menos largas y estrechas, ordinariamente derechas, sen- tadas y envainadoras, alternas, cilindricas y huecas, triquetras ó lanceolado-lineares. Flores en cabeza ó cima en el vértice de un 254 MÉTODO DICOTÓMICO. bojordo mas ó menos largo saliendo del centro de las hojas, algunas veces entremezcladas con bulbillos ; de periantio campanudo ordi- nariamente blanco, verdoso ó rosadito y raras veces amarillo, con 6 sépalos distintos marcescentes, otras veces iguales; está 6-par- tido ; de los filamentos de los 6 estambres 3 son simples y 3 termi- nados por 3 puntitas cuya mediana sola es anterífera, y todos in- sertos en la base calizinal é hipójinos ; ovario globoso, trilocular, pauciovulado y algo trígono á la vez, de cuyo ápice sale un estilo subulado terminado por un estigma simple cabezudito. Cápsula algo trígona ó trilobulada, un poco deprimida, con 3 celdas de dehiscen- cia septífraga que se efectúa por 3 valvas, con 1 ó 2 semillas negras, angulosas y redondeadas á la vez en cada una : alliiim, F. 16, T. 11. 415. Plantas siempre acuáticas y. herbáceas, en cuyas flores se puede distinguir un cáliz y una corola con muchos pétalos, 415 Ms. — Arboles mas ó menos grandes y corpulentos, y que se elevan á veces hasta 100' de altura, con hojas simples, alternas, pecioladas, oblongo-aguzadas ú ovales, sub-enteras ó apenas dentaditas, lampi- ñas ó alampiñadas, acompañada la inserción del peciolo por dos es- típulas pequeñas caducas ordinariamente. Flores en racimos ó co- rimbos axilares mas cortos que las hojas, ó solitarias y axilares con los pedicelos doblados hacia abajo; cáliz deciduo ordinariamente con 4, 5, 8 segmentos uni ó biseriados; estambres muchos pubes- centes, de anteras alargadas corniculadas por el ápice y abriéndose por poros infraterminales ú ovales, que por fin se vuelven grietas. Ovario 4, 5-locular, con algunos óvulos en cada celda, de cuyo ápice sale un estilo simple ó 4, 5-fido, incluso ó eserto. Fruto capsular, leñoso, erizado, loculícido y con semillas provistas de un a'rilo; em- brión recto, con cotiledones grandes y sub-cai^nosos; endospermo delgado : solanea, F. 99, T. II, G. I. 415 bis. Fruto capsular 1-locular y polispermo, mas ó menos grueso, coronado por el estigma con figura de escudo; endospermo harinoso muy grueso; flores blancas ó amarillas, 416. — Fruto con- sistiendo en nuecesitas ó carpelos anidados en un disco carnoso ; semillas sin endospermo; flores de ordinario rosadas ó purpúreas; hojas largamente, pecioladas, derechas y saliendo por fuera del agua, alternas en gruesos rizomas pegados en el fondo de la madre de los riachuelos, escutiformes, enteras ó recortadas; flores solitarias en el ápice de un bojordo muy largo, derecho y axilar ; periantio con muchas divisiones todas coloridas y dispuestas por series, des- iguales, anchas, ovales, algo aguzadas y abiertas ; muchísimos es- tambres insertos en el receptáculo; ovario unilocular, con I, 2 óvu- los pendientes, turbinado y anidado en el receptáculo, coronado por un estilo persistente terminándose en un estigma lobulado; recep- táculo apeonzado, con alveolos conteniendo los frutos aqueniformes: nehimbo, F. 92. 416. Yerbas de cuyos rizomas gruesos salen hojas alternas, sim- ples de peciolos larguísimos, cilindricos, acompañados por la inser- ción de estípulas, y cuyo ápice lleva un disco grande acorazonado, algo abroquelado, sinuado-dentado ó entero, aplicado á la superficie del agua por su cara inferior como esponjosa, con las venas dis- VEJETALES HERMAFEODITOS APÉTALOS. 255 puestas en redecilla, de ordinario blanca teñida de rosadito, mien- tras la superior es verde j lustrosa ; periantio de muchas divisiones dispuestas por' series, cujas esteriores son verdes y Jas interiores Llancas, petaloídeas, mas ó menos largas, lanceoladas y puntiagu- das ú oblongo-lanceoladas inserías en el torus junto con los estam- bres cuyos esteriores son mucho mas largos que los internos, y con apéndices mas largos, lineares y obtusos, de anteras con las celdillas apenas mas eütrechitas que el conectivo ; apéndices de los estigmas cortos, cónicos y puntiagudos ó claviformes y per fin refiexos ; ova- rio globoso, de ápice truncado, unilocular, con muchos óvulos espar- cidos por la superficie de su cara interna : nymphísa, F. 91 . 417. Fruto capsular, estambres 6; plantas herbáceas, 418. — El fruto consiste en aquenios numerosos agrupados en el centro de la flor, sésiles y con un penacho mas ó menos largo que no es otra cosa sino el estilo persistente y crecido ; bejucos larguísimos, de ta- llos delgados, leñosos y ramosísimos, pubescentes ó alampiñados, sarmentosos y sosteniéndose por medio de los peciolos de las hojas, que se enroscan en los vejetales vecinos ; hojas alternas muy parti- das, de manera que parecen compuestas, envainadoras por la base del peciolo, tomadamente divididas con los segmentos aovados y enteros ó pinatisectas ; flores en panojas polígamas ó dioicas, mas ó menos pubescentes, de periantio coroliforme con 4, 8 sépalos, cunei- formes, oblongos, abiertos y peludos ó pubescentes, de inflorescen- cia valvar ; estambres muclios, hipójinos, cuyas anteras adheridas tienen sus celdillas estrorsas ó laterales; embrión diminuto alojado en el ápice del endospermo : clematis, F. 96, T. I. • 418. Plantas herbáceas de tallo bastante ramoso superiormente y alto de 3' á 5', con hojas simples, alternas, basinervias, enteras, sentadas y amplexicaules cuando caulinares, mientras que cuando son radicales tienen un peciolo bastante largo, son mayores, aova- do-lanceoladas y también basinervias, lampiñas; flores pequeñas, á veces polígamas y en panoja.s grandes, flojas y terminales, cons- tando de un periantio 6-partido, dé segmentos iguales, abiertos y glandulosos por la base, 3 son mas esteriores; 6 estambres derechos insertos en la base de las divisiones calizinales, con filamentos su- bulados, cuyas anteras arriñonadas tienen sus dos celdillas con- fluentes. Pifetilo formado de 3 ovarios distintos, uniloculares, con 1 ó 3 óvulos, cuyo ápice divaricado y aguzado se termina en un estig- ma casi sentado; el fruto se compone de 3 carpelos oblongos, algo puntiagudos, abriéndose ])or la parte interna y que contienen de 1, 3 semillas: veratrum, F. 15, T. I. 419. Flores ginandras, es decir cuyos estambres están soldados con el pistilo, 420. — Flores nunca jamás ginandras, 445. 420. Con dos ó tres estambres íntimamente unidos al pistilo, de manera que forman con él una columna llamada ginostemo, de an- teras operculadas cuyo polen es en masa ó en granitos aglutinados, 421. — Estambres 6, 5 soldados y confundidos en el centro de la flor con el estilo y con el estigma, y formando así una columna en que están subsesiles ; plantas herbáceas, matas fruticosas algo enreda- deras, bejucos ó arbustos sarmentosos y volubles, de tallo mas ó 256 MÉTODO DICOTÓMICO. menos grueso, muy largo, muy ramoso, de corteza mas ó menos corchosa, ó lisa j lampiña ó alampiñada en las partes herbáceas; hojas simples, alternas, á veces muy grandes, pecioladas, enteras ó lobuladas, arriñonadas, acorazonadas, con una punta, acorazonado- oblongas, obtusas, como aflechadas, con una estípula cordiforme mas ó menos grande, persistente ó sub-persistente, pero que suele faltar á veces, pedatinervias. Flores ordinariamente axilares y so- litarias, otras veces en especies de racimos y no axilares, peduncu- ladas y de color triste, oscuro, pintadas de bruno y de amarillento mas ó menos oscuro, á veces muy grandes y de periantio cuya figura y forma son características, monosépalo con la base mas ó menos hincliada, el tubo mas estreclio y derecho y el limbo mas ó menos dilatado, irregular ordinariamente, con uno ó con dos labios y algu- nas raras veces sin ninguno ó á lo menos cuyo labio superior está apenas pronunciado ; ovario largo y siguiendo al pedúnculo ordina- riamente como claviforme y asurcado, con 6, 5 celdas con muchos óvulos, pegados en una placenta central ó axil, estilo corto con el canal visible, terminado por un estigma 6, 3-lobulado. Cápsula mas ó menos gruesa y elíptica ó sub-aovada, de dehiscencia superior y septícida, con 6 celdas conteniendo muchas semillas achatadas, de embrión diminuto, situado en el ápice de un endosp^mo carnudo : aristolocMa^ F. 45. 421. Dos estambres ó dos anteras, 422. — Tres estambres, de los cuales los dos laterales solos son fértiles, mientras la tercera inter- media es estéril; mitad del estilo libre; estigma con 3 arcólos opuestos alas anteras; plantas herbáceas terrestres, de raices fibro- sas, y tallos con hojas alternas, simples, envainadoras; flores en, es- pigas terminales, de periantio abierto con 6 divisiones desiguales, de las cuales 3 son interiores algo mas estrechas, y 3 esteriores, de las cuales dos son laterales, uninervias, mientras la tercera ó me- diana es mucho mayor, con figura de zapato y se llama labelo. Gi- nostemo cono, inclinado hacia abajo, de ápice trífido, cuyos lóbulos laterales son anteríferos por su parte inferior, mientras el interme- dio es estéril y petaloídeo ; anteras de celdas separadas y sub-bival- ves ; polen pultáceo-granujiento ; ovario ovoideo unilocular poliovu- lado, con estigma deltoídeo situado en la cara de la columna, por debajo de las anteras : cyprÍ2:>edium, F. 27, T. I. 422. Cápsula mas ó menos ovoidea ó fusiforme, con 3 ángulos mas ó menos pronunciados, unilocular, conteniendo muchas semillas muy pequeñas insertas á lo largo de 3 placentas persistentes y cor- respondiendo á los 3 ángulos persistentes saliendo del pedúnculo y reunidos en el. ápice por el periantio marcescente, mientras las 3 valvas ó ventallas intermedias se desprenden y se caen, 423. — Cáp- sula silicuiforme, larga de 6" á 8", indehiscente y como pulposa inte- riormente : plantas suculentas sarmentosas, de tallos como herbá- ceos, larguísimos y ramosísimos, lampiños, mas ó menos asurcados, cilindricos ó algo elípticos, provistos de zarcillos ópue^^tos á las ho- jas, simples, enteras, coriáceas, alternas, sentadas, no envainadoras, articuladas con el tallo ó los ramos, mas veces reticuladas, lampi- ñas, ovales, elípticas ó aovado-oblongas, de cara superior algo con- VEJETALES HERMAFRODITOS APÉTALOS. 257 cava. Flores rosadas ó blancas grandes y en espigas ó racimitos axilares y paucífloras, cortamente pediceladas y de periantio coro- liforme, con 6'divisiones desiguales cuya inferior ó labelo es cón- cava, cuculiforme, con el limbo dilatado en lámina undulosapor los bordes, los demás son subiguales, conformes y libres; antera termi- nal opercular, con 2 polinias bilobuladas y granujientas : xanilla F. 28. 423. Polinias ó masas polínicas coráceas, 428. — Polinias nunca coráceas, pero mas ó menos pulverulentas, ó aglomeradas en lobu- litos coherentes por medio de una sustancia elástica, 424. 424. Antera terminal opercular, persistente ó caduca ; estigma sin pico ninguno, 425. — Antera dorsal persistente, casi paralela con el estigma que frecuentemente se prolonga en pico pequeño agrie- tado, ó paralela con la cara del ginostemo, 426. 425. Plantas herbáceas terrestres, cuyo tallo con hojas simples envainadoras y alternas sale de un rizoma rastrero y se termina por una espiga de flores verdosas, coloridas y pubescentitas, de un pe- riantio con 6 divisiones abiertas, conformes, cuyas interiores y es- teriores son subiguales; de labelo estendido, interrumpido y for- mado de dos partes sobrepuestas, cuj-a una es inferior y cóncava, mientras la otra superior, alargada y petaloídeo-entera, ginostemo semi- cilindrico, con la antera situada por el ápice de su cara poste- rior, y cordiforme, bilocular, conteniendo masas polínicas pulveru- lentas y cuya cada celda es dividida en 2 partes por un surco lonji- tudinal : epipactis, F. 27, T. VI, S.-T. II. 426. Polinias cuatro, 427. — Polinias 2, lineares, claviformes y fijadas en la glándula común ; yerbas de hojas radicales, óvalo-lan- ceoladas y nerviosas; bojordo de base provista de brácteas envaina- doras, mientras que el vértice desnudo es peludo; flores en espiga floja, de periantio algo endurecido con 6 divisiones, cuyas laterales puestas por debajo del labelo y adheridas con su base se vuelven por fin conniventes con las 3 interiores; labelo sentado, estendido, entero y paralelo con el ginostemo que abraza con sus márjenes y se prolonga en espolón ; ginostemo corto ; antera terminal estipita- da, bilocular y escotada, piquito laminiforme y recto \ pelexia, F. 27, T. VIL . 427. Juntas con la glándula común; antera posterior incompleta- mente cuadrangular, 428. — Encorvadas por la base y coherentes por el ápice ; antera terminal provista de un piquito; yerbas de tallo derecho con hojas alternas, oblongo-lanceoladas y estriadas, sim- ples enteras; flores grandes hermosas y dispuestas en espigas ter- minales, de un periantio con 6 divitiones cuyas esteriores son erguidas, con las dos laterales obovales, tiesas, papilosas y volvién- dose por fln ovales y planas ; mientras las 3 interiores son casi se- mejantes á las laterales; labelo cortamente unguiculado, ancha- mente oblongo, encrespado, papiloso y con el disco provisto de laminitas ; ginostemo erguido, ¿emi-cilíndrico; antera terminal apendiculada : ulantlm, F. 27, T. VII. 428. Polinias en número definido, 429. — Polinias en número in- definido y muchísimas por consiguiente, 431. TOMO I 17 258 MÉTODO DICOTOMICO. 429. Antera erguida, con las celdas contiguas y paralelas ; poli- nias con dos glándulas distintas, encerradas en la plegadura bilocu- lar j acogallada del estigma, 430. — Antera erguida también, de celdas sueltas, diverjentes por la base y adheridas á los canales es- tigmáticos ; piquito plano y adheiido á la antera; estigma provisto de dos prolongamientos : plantas terrestres herbáceas, de raiz tu- berculosa, con hojas radicales lanceoladas, de flores en espigas ter- minales en el vértice del tallo, cuyo periantio 6-partido es galeifor- me, con los segmentos sub -equilongos, cuyos esteriores son mucho mas angostos que los interiores bi ó trífidos y conniventes ; labillo alargado, colgante, entero, bi ó trífido y prolongándose en espolón : Uhenaria, F. 2T, T. Y, 430. Plantas herbáceas terrestres de raices con dos tubérculos dídimos, redondeados, enteros ó palmeados; hojas radicales blan- das y algo suculentas, alternas, sésiles y lanceoladas ; flores en es- pigas terminales en la sumidad del bojordo á veces foliáceo, con ó sin brácteas ; periantio galeifor me, cujeas divisiones son casi igua- les ; las 2 esteriores laterales, converjentes ó encorvadas, se vuel- ven por fin converjentes á manera de bóveda, con los 3 interiores semejantes á ellas; labelo anterior, adherido con la base del ginos- temo, entero, tri ó 4-lobulado y de base prolongada en espolón ; antera erguida, de celdas paralelas y contiíjuas : orchis, F. 2*7, T. Y, S.~T. I. 431. Con una especie de membrana celular coherente en colitas elásticas pulverulentas y con mayor frecuencia redobladas, 432. — Sin tejido celular accesorio alguno : yerbas epífitas de rizoma fili- forme y monófilas, de flores axilares solitarias amanojadas ó raci- mosas ; periantio cuyas divisiones esteriores conniventes son sub- iguales, las laterales ó todas adheridas y mayores que las interio- res; labillo libre paralelo al ginostemo, diforme é intejérrimo; ginofctemo libre y áptero, continuo con el ovario ; antera bilocular y membranosa por el ápice ; polinias dos, frecuentemente reunidas por el ápice á favor de una colita pulverulenta : pleurothalis, F. 27, T. II, S.-T. I. 432. Polinias reunidas por medio de una membrana celulosa co- herente á favor de colitas .elásticas pulverulentas, frecuentemente redobladas, sin glándula alguna ; antera terminal opercular, 433. — Polinias aglutinadas al momento de la florescencia, con una co- lita elástica y á la vez con la glándula del estigma ; antera termi- nal y rara vez dorsal, opercular. 441. 433. Antera bi ó 4-locular; polinias cuatro, 434. — Antera con 8 celdas, polinias 8 : yerbas terrestes de hojas ensiformes y plega- das, enteras y sencillas; bojordo ramoso con muchas flores ordina- riamente grandes y preciosas, de periantio cuyas divisiones esterio- res son abiertas é iguales, mientras las internas son subigaales, abiertas ó conniventes ; labillo ar-liculado con la base del ginostemo con figura de capuz 6 de saco, trilobulado y cuyo limbo está ador- nado de laminitas ó de tubérculos; ginostemo alargado y semi-ci- líndrico; antera carnosa; polinias igualesy coherentes por medio de 4 colitas pulverulentas; Mettia, F. 27, T. lY, S.-T. III. YEJETALES HEEilAFRODlTOS APÉTALOS. 259 434. Anteras biloculares carnosas; colitas de las polinias otro tanto redobladas, 435. — Anteras 4-loculares carnudas y con tabi- ques marjinales membranosos; colitas de las polinias otro tanto redobladas : yerbas epífitas con hojas solitarias ó mellizas, coriá- ceas y situadas en el ápice del seudo-bulbo; floras grandes y her- mosas, saliendo con frecuencia de una espata grande j membra- nosa; de periantio cuyas divisiones esteriores membranosas ó carnositas son abiertas é iguales, mientras las interiores son con frecuencia mayores; labillo articulado con el ginostemo claviforme semi-cilíndrico y alado,, envuelto en el labelo de figura de capuz, entero ó trilobulado : cattleya, F. 21, T. IV, S.-T. I. 435. Antera completa ó incompletamente bilocular, 436'. — An- tera unilocular; plantas herbáceas epifitas de hojas solitarias y es- triadas ; flores poco notables dispuestas en espigas y de periantio llano, cuyas divisiones esteriores é interiores son iguales, mientras las laterales connatas están por debajo del labillo, libre, sin espolón, muy abierto y entero, psro con callos situados por su parte media* ginostemo erguido, cilindrico, aguzado, con la boca ó abertura del estigma vertical ; antera dorsal paralela con el estigma ; ginostemo plano algo calloso, marjinado ó como alado posteriormente; poli- nias dos, enteras con las colitas alargadas y cuneiformes ; glándula diminuta : natylia, F. 21, T. III. S.-T. IV*: 436. Antera completamente bilocular, 437. — Antera incomple- tamente bilocular, 440. 437. Ginostemo erguido, semi-cilíndrico, áptero, con. ó sin pico pequeño, 433. — Ginostemo corto, acanalado, alado hacia el ápice y sin pico; plantas herbáceas, de hojas dísticas en el vértice del seu- do-bulbo, carnosas, ensiformes é envainadoras por la base; flores solitarias axilares y acompañadas de una bráctea ó en espigas, de periantio profundamente 6-partido, cuyas divisiones carnosas y abiertas son cinco, subiguales, oblongas, esteriormente aquiladas y planas interiormente^ mientras la sexta ó labillo, algo mas larga, presenta interiormente dos líneas salientes ó es tuberculosa; antera terminal opercular; polinias dos '. ;pachyphyllum, F., 27^ T. III, S.- T. III. 438. Ginostemo sub-cilíndrico rara vez alare-ado y semi-cilíndri- 00, ein pico alguno, 439. — Ginostemo provisto de un pico : yerbas epífitas acaules, de hojas coriáceas; bojordos apanojados provistos de brácteas envainadoras; flores pequeñas y pAlidas, de periantio cerrado, cuyas divisiones- esteriores son connatas con la base del la- billo, las laterales aproximadas inferiormente y semejantes á las interiores ; labillo mucho mayor y dispuesto á manera de saco por la base, con la uña callosa y paralela al ginostemo, de limbo esten- dido, abierto y bilobulado; polinias dos, asurcadas posteriormente; colita linear encerrada ; glándula obaovada : iiio^sis, F. 27, T. III, S.-T. II. 439. Yerbas seudo-parásitas, de periantio abierto, cuyas divisio- nes esteriores é interiores son subiguales ; labillo continuo con la base del ginostemo, sentado, carnoso, entero, mucho mas ancho que las otras divisiones, y provisto de un espolón recto y con 260 MÉTODO DICOTÓMICO, figura de cuerno. Antera troncada; polinias 2-bipartibles de colita corta yestrecha; glándula triangular : angrcecum., F. 2*7, T. III, S.-T. I. 440. Ginostemo de vértice sin alas, 441. — Ginostemo erguido, semi- cilindrico, de vértice alado por sus ambos lados; plantas her- báceas epífitas, seudo-bulbosas, de hojas coriáceas, planas, dobladas sobre sí, triqíietras 3^ á veces como cilindricas; bojordos mas ó me- nos largos, apanojados ó espigados, con flores ordinariamente muy primorosas y de figura muy variada, cuyo periantio estendido tiene las divisiones etteriores frecuentemente ondulosas y semejantes á las interiores y cuj-as laterales libres son un poco connatas con el labillo máximo, continuo con el ginostemo, espolonado, lobulado y de base adornada de tuberculitos ó de crestitas; antera con un pi- quito corto ó alargadito y puntiagudo ; polinias dos, asurcadas pos- teriormente y con colitas planas ; glándula oblonga : oncidium, F. 27, T. III, S.-T. V. 441. Erguido, libre del labillo y de base ó de ápice por ambos la- dos franjeado, rizado ó mútico, 442. — Semi-cilíndrico, sin franjas y de base prolongada en que se articula el labillo ; yerbas epífitas seudo-bulbosas, caulescentes ó acaulas, de hojas pelegadas y coriá- ceas; pedúnculos radicales axilares ó terminales, y entonces saliendo del ápice del seudo-bulbo, uni ó multífloros; periantio abierto ó connivente, cuyas divisiones esteriores y laterales tienen la base prolongada á manera de saco y connata con el ginostemo ; interio- res casi semejantes; labillo articulado con la base del ginostemo, antera opercular ; polinias dos, bipartibles ó enteras; colitas cortas y pegadas á una glándula transparente : maxilaria, F. 27, T. III, S.-T. VII. 442. Labillo continuo con la columna, de pié alargado unguicu- lado, plano, nunca con figura de saco por el ápice tripartido, des- nudo, 443. — Labillo espeso, carnosito, desnudo, ventrudo ó estriado y llano á la vez, onduloso y con forma de saco por debajo del ápice algo trílobo, 444. 443. Plantas terrestres ó seudo-parásitas, cuyos seudo-bulbos, á veces largo hasta de una vara y mas, son fusiformes, bastante grue- sos y terminados por 5 á 7 hojas gramíneas, bastante largas, dísti- cas, cu3'o limbo está articulado con el vértice de la vaina, por una articulación escamosa, de manera que después de desprendido el ápice del seudo-bulbo se queda espinoso, la parte de las nervaduras correspondiente á la articulación teniendo papel de espinas. Del pié y lado de la cebolleta ó seudo-bulbo mas nuevo y mas tierno sale uno ó algunos bojordos altos de 3 á 5', derechos, cilindricos y del ta- maño del dedo meñique por la base, con nudos poco pronunciados, de cada cual sale una bráctea grande, foliácea y envainadora ; son largas de 3 1[4 á 2 li2", enderezadas, aplicadas al tallo que tienen envuelto y algo avejigadas, dispuestas casi á igual distancia las unas de las otras, y terminándose por un racimo apanojado y bastante fornido de flores amarillas bastante grandes, pedunculadas y sa- liendo de la axila de una bráctea semejante á las ya mencionadas, pero mas pequeña. Tales flores tienen 2 á 2 li2" de diámetro, con 6 VEJETALES HERMAFRODITOS APÉTALOS. 261 divisiones perigoniales algo desiguales y dispuestas en dos series ; columna erguida semi-rolliza, j sin embargo algo abovedada y como espatuladita á la par; antera bilocular con 2 polinias bilobuladas posteriormente, de colita linear corta; glándula aovada. Cápsula de pericarpio algo carnoso ovoídeo-trígona y del tamaño de un huevo pequeño de gallina : ci/ríopodncm, F. 27, T. III, S.-T. VI. 444. Yerbas epífitas ó terrestres seudo-bulbosas ó de tallos mas ó menos cortos; hojas plegadas, coriáceas ó gramíneas, cuya base en- vainadora se queda vistiendo el seudo-bulbo mas ó menos largo á manera de membrana, dejando á veces en el ápice, al desprenderse, pujas ó espinas en número de 3 para cada vaina que se queda y con que se articulaban las nervaduras y costillas del limbo caido ; bo- jordos radicales y axilares mas ó menos largos terminados por hermosas flores dispuestas en espigas ó en racimos, mas ó menos ver- dusco-amarillentas y bastantes veces disciplinadas, con color purpú- reo mas ó menos oscuro ; periantio globoso connivente ó estendido, con las divisiones esteriores casi iguales con las interiores; ginos- temo libre y áptero ; antera troncada por su parte anterior; polinias dos bilobuladas ó asurcadas posteriormente ; colitas máximas y des- nudas y por fin elásticamente contráctiles; glándula cartilajinosa sub-cuadrangular: catasetum, F. 27, T. III, S.-T. VI. 445. Flores envueltas en una ó algunas espatas, 446. — Flores desprovistas de espata, ó con una membranosa, 449. 446. Dos espatas, cuya una común grande y coriácea es colorada, mientras la otra, pequeña y membranosa, es propia á cada flor, 447. — Una espata única monóflla ó polifila, petaloídea ó mem.branosa, 448. 447. Plantas herbáceas vivaces, bastante grandes, de los lugares húmedos y pantanosos, de cuyo rizoma bastante grueso salen hojas grandes, largamente pecioladas y que parecen las del plátano ena- no, derechas, elípticas, lanceoladas, envainadoras por la base del jieciolo, de cuyo centro sale un bojordo derecho de como 2" á 2 ll2" de diámetr© por la base y alto de 4' á 5', cuya mitad superior está provista de espatas coloradas con figura de canoa, dispuestas dísti- camente, y conteniendo en su axila muchísimas fiores agrupadas, cortamente pedunculadas y envueltas cada una en su espata parti- cular membranosa : de periantio monófilo, bilabiado, con el labio superior bífluo; estambres cinco; un nectario bífido ó de dos hojas; pistilo cuyo ovario trilocular pauciovulado se termina por un estig- ma casi sentado. La fruta es una cápsula oblonga, trilocular mono- sperma -.keliconia, F. 24, T. I. 448. Espata mono ó polifila, siempre membranosa y nunca jamás petaloídea, única ó múltiple, 449. — Espata monofila, única, gran- de, cóncava, carnuda, petaloídea y pronto caduca. Grandísimas y primorosísimas plantas herbáceas de cuyo rizoma salen grandes hojas de base envainadora cuyas vainas juntas forman una especie de tronco bastante grueso y mas ó menos alto, según la clase, de 3' á 8' y se prolongan superiormente en peciolos mas ó menos cortos sosteniendo limbos elípticos, obtusos , enteros , delgados y muy grandes, cuyas nervaduras muy finas son todas paralelas y salen 262 MÉTODO DICOTÓMICO. horizontalíiií^nte de la costilla gruesa t que es la continuación del peciolo ; prefoliacion convoluta ó enrolladas sobre sí mismo en car- tucho, el eje quedándose derecho. Del medio de las hojas sale un bojordo bastant-e grueso, verde, muy fuerte, derecho al principio, llevando en su ápice una yema del tamaño como del puño ó algo menos, ovoidea y morad u seo-rojiza, mas tarde se dobla el bojordo, de tal manera, que la yema se halla por afuera y cabizbaja : enton- ces su espata superior, la cual ocupaba antes su base, se abre y se dobla por arriba, de tal manera que aparecen las flores que se ha- lla,n en su axila, las cuales, en número como de 15, son baítante grandes, por ser muy largo y grueso su ovario proporcional mente á la parte libre del periantio, dispuestas en dos series insertas sobre un diente único del pedúnculo que sigue alargándose á medida que nuevos grupos de flores van saliendo y abriéndose, de tal manera que forma así una espiga monstruosa que se termina por flores es- tériles. Después de verificada la fecundación, laespata se desprende y se cae al suelo, mientras que las fl.ores casi sentadas y cabizbajas se enderezan y su pedúnculo se alarga un poco, de tal manera q^ue los frutos están siempre mas ó menos enderezados y mas ó menos arqueados; flores de periantio monófilo, bilabiado, petaloídeo, cuyo labio superior enderezado y recto es euadridentado, mientras el in- ferior, al contrario entero, es algo mas corto, cóncavo y nectarífero; 6 estambres, de los cuales uno solo está fértil y algo mas largo que los demás estériles, lo que se observa solo en las flores de la base de la espiga, porque en las del vértice al eontrario uno solo es estéril, mientras todos los demás son fértiles; ovario largo, grueso, fusi- forme, algo trígono y poliovulado, llevando en su ápice un estilo simple terminado por un estigma cabezudo ó con 3 surcos ó lóbulos muy poco marcados. El fruto es una baya de color variando según las especies, amarilla ó mas ó menos morada, carnuda, masóme- nos larga y gruesa, fusiforme, lijeramente trígona, mas ó menos arqueada : 7nusa, F. 24, T. II. 449. Flores con 6 estambres, 450. — Flores con menos de 6 es- tambres, 465. 450. Raiz bulbosa ó una cebolla, 451. — De raíz nunca jamás bul- bosa, 456. 451. De estambres salientes, diverjentes y cuya base de los filamentos está reunida por un nectario membranoso coroni forme, 6-lobo é inserto en la garganta del periantio, 452. — Estambres también salientes ó esertos, no diverjentes pero inclinados ó sola- mente derechos, sin nectario, 453. 452- Primorosa yerba que se halla en los pastos, de hojas todas radicales, sentadas, anchas de como 1 1|2'' á 2" y largas de 6" y mas, como dísticas, algo tendidas por el suelo, de su lado sale un bojordo alto de como 2' algo mas ó menos, que lleva en su ápice de 6 á 8 flores blancas, bastante grandes, muy lindas, de fragancia de- lieiosa, saliendo de una espata membranosa que se revienta en dos piezas desiguales; periantio monosépalo infundibuliforme, de tubo larguísimo y con el limbo partido en seis divisiones estendidas, bas- tante largas y estrechas ; seis estambres insertos en el vértice del VEJETALES HERMAFRODITOS APÉTALOS. 263 tubo j cuyos filamentos están soldados entre sí por medio de un nectario bilobado, formando en el centro de la flor una' hermosa corona hexágona; vértice de los filamentos verde y algo encorvado, terminado por anteras grandes y dorsifijas; pistilo de ovario, algo largo, trígono y un poco fusiforme, de cuyo vértice sale un es- tigma sencillo, troncado, glandulosoy casi cabezudo. El fruto es una cápsula trilocular polisperma, cuyas semillas están á veces reem- plazadas por una especie de bulbillo que se va desarrollando en su lugar : pan eral mm, F. 21, T. 11. 453. De periantio infundibuli forme y tubuloso, con tres divisio- nes cuya punta se termina como en gancho, sin escama alguna en la garganta ; estigma único; espata membranosa partida en algunas divisiones de:^iguales é irregulares, 454. — De periantio campanudo con las divisiones aveces reflexas, provisto de seis escamitas situa- das en la entrada del tubo ; tres estigmas; espata reventándose en 2 ó algunas piezas, 455. 454. Planta herbácea, con hojas radicales, simples, sentadas, bastante largas, estrechas y lanceoladas, derechas, dentaditas ó aserraditas por los bordes, de cuyo lado sale un bojordo cilindrico, alto como de 1' á 1 1|2', con dos espatas bastante grandes, algo car- nudas, coloradas, situadas en su vértice y conteniendo 6 á 8 primo- rosas ñores blancas algo teñidas de color de rosa, de periantio in- fundibuliforme, cuyo tubo largo lleva un limbo de 6 divisiones abiertas, alesnadas, algo acanaliculadas y dobladitas hacia fuera ; 6 estambres de filamentos colorados, largos, distintos, libres, salien- tes é insertos en la garganta del periantio ; pistilo de ovario algo trilobado, oval, un poco trígono, trilocular, poliovulado, de cuyo vértice sale un estilo filiforme algo mas largo que los estambres, terminándose por un estigma bífido. Fruto capsular ovoideo, mem- branoso, algo trígono, trilocular y polispermo, cuyas semillas globosas ó esféricas tienen la testa alí?© carnosita : crimim, F. 21, T. I. ^ 455. Plantas herbáceas vivaces pequeñas ó bastante grandes, con flores ordinariamente bastante grandes y lindas, de hojas radicales, sentadas, derechas, bastante largas, mas ó menos estrechas ó lan- ceoladas, de cuyo centro sale un bojordo de 6" hasta Tal 1|2' de alto, según las especies, y que lleva en el vértice una sola ó algunas flores mas ó menos rosadas, algunas raras veces amarillas ó colora- das, envueltas por lo común por una espata membranosa que so re- vienta en algunas piezas irregulares, de manera que parece con^o polifila; periantio petaloídeo, campanudo, partido en 6 divisiones derechas ó á veces dobladas hacia fuera, con 6 escamitas en la i)Oca del tubo, correspondientes á la inserción ó mejor á la salida de los filamentos, desiguales tanto en proporción como en dirección ; ova- rio pedunculado, trígono y algo ovoideo, trilocular poliovulado, de cuyo ápice sale un estilo filiforme, cilindrico, mas largo que los es- tambres, y terminándose por un estigma trífido. Cápsula trilocular polisperma : amariUis, F. 21, T. I. 456. Un rizoma mas ó menos desarrollado, 464. — Ningún rizoma y raices fibrosas, 457. 264 MÉTODO DICOTÓMICO. 457. Fruto capsular, 458. — Fruta bacciforme ó sincarpio, 461. 458. Vejetales par¿isitas; cápsulas uni ó triloculares, con muchas semillas velludas 6 peludas, 459. — Vejetales nunca parásitas y por consiguiente siempre terrestres ; cápsulas triíoculares siempre", po- lispermas, y cujas semillas desnudas son llanas y dísticas, 460. 459. Vejetales herbáceos vivaces que se nutren á espensas de los demás vejetales en que viven, raras veces son terrestres ; hojas radi- cales de ordinario arrosetadas, alternas ó dísticas y entonces un poco caulinares, coriáceas, mas ó menos estrechas, á veces filiformes, con frecuencia arqueadas hacia fuera, de cara superior cóncava y dispuesta como á manera de gotera, ordinariamente enteras, sin embargo algunas veces espinosas por los bordes, lustrosas y lampi- ñas ó bozosas y blanquecinas, mas ó menos largas y lanceoladas, abrazadoras por la base. Del centro de las hojas sale un boj ordo mas ó menos largo, filiforme y corto ó bastante grueso y provisto de al- gunas hojitas á veces reemplazadas por unas brácteas y terminán- dose en una espiga ó en una panoja de flores con periantio de 6 di- visiones, de las cuales 3 son esteriores algo enrolladas y persistentes mas ó menos verdes, mientras las 3 interiores son petaloídeas y caducas ; 6 estambres. Cápsula oblonga, linear, trilocular j á veces unilocular, con muchas semillas alargadas y velludas : tiUandsia, F. 18. 460. Grandes y primorosas plantas vivaces de los lugai^es areno- sos y pedregosos, cuyo tallo corto es sub-leñoso y del tamaño como del muslo ó menos, según la especie y el terreno en que vejeta; hojas al principio todas radicales y arrosetadas, pero algo mas tarde cau- linares y esparcidas, carnosas, derechas, lanceoladas, sentadas, lar- gas de 2 1|2' á 3' y anchas de 3" á 4" en el medio ó parte mas ancha, algo undulosas por los bordes algo dentados y terminándose en una espina fuerte y prieta, de cara superior cóncava, mientras la este- rior es convexa, basinervias y lampiñas ; del centro sale un bojordo mas grueso que la pierna, que se eleva á 15 ó 20' y mas, derecho, provisto de algunas hojas pequeñas, volviéndose arriba como brác- teas grandes, y entonces de su axila salen brazos mas ó menos lar- gos, mas ó menos estendidos y simples, que cargan con las flores, dispuestas en grupos ó primorosas cimas, cuya reunión constituye un tirso muy grande ó panojas; de periantio coroliforme ó petaloí- deo, monosépalo, tubulado, infundibuliforme, con 6 divisiones pro- fundas mas ó menos abiertas; estambres salientes de filamentos largos, con anteras largas, movibles, pegadas en su punta por el medio de su dorso y así transversales; ovario algo trígono y ob- longo, trilocular, poliovulado y de cuyo vértice sale un estilo fili- forme tan largo como los estambres y terminado por un estigma ca- oezudo. Cápsula algo trígona, con tres celdas conteniendo muchas semillas dispuestas en dos series: algunas veces las cápsulas no exis- ten y están reemplazadas en las ramitas por yemas que después de bastante desarrolladas se caen al suelo en donde echan raices : agave, Y. 21, T. IV. 461. Frutos agregados formados de muchas bayas soldadas entre VEJETALES HEIiMAFEODITOS APÉTALOS. 265 SÍ j constituyendo un sorosis, 462. — Bajas sueltas ó libres dispues- tas en panojas derechas, 463. 462. Plantas herbáceas vivaces, con hojas todas radicales j ar- rosetadas, casi rectas ó un poco diverjentes al principio, ¡¿entadas, envainadoras por la base, lanceoladas, largas de 2' á 2 1[2', de cara fcuperior cóncava, con aguijones mas ó menos numerosos y gancho- ?:*os por los bordes, lampiñas j anchas de 2" á 3", puntiagudas y de cuyo medio sale un bojordo corto bastante grueso y cilindrico, mas 6 menos foliáceo ó solamente escamoso, largo de 1 1[2' á2', algo mas ó menos, terminándose por una espiga gruesa, cilindrica ú ovoi- dea, formada de muchísimas flores moradas ó rosadas, sentadas en la axila, de brácteas que no tardan en volverse carnudas y soldarse entre sí y también con los ovarios de las flores antes libres y sueltos, ]' y 4' de altura; lampiños, pubescentes ó velludos, con hojas simples, corta- mente pecioladas, aovadas ú ovales, aserradas, de ápice obtuso ú obtusito y de base aguzada y pareciendo volverse peciolo, opuestas. Flores azules de ordinario ó á veces coloradas,* en espigas termina- les delgadas, largas, derechas ó algo arqueadas, cilindricas, cujo eje bastante grueso presenta huecos ó escavaciones en las cuales se VEJETALES B:ERMA.FRODITOS MONOPETALOS. 275 hallan las flores solitarias y sentadas en la axila de unabráctea bas- tante grande, que después de la fecundacian tapa dicha cavidad en donde se van madurando las semillas; de cáliz monosépalo, tuhia- laO DICOTÓMICO. gante, cnjas semillas, lir.eares, aguzadas por sus dos estrenóos, son sin ala, pero provistas de un poco de lana sedosa por la punta : ca- talpa, F. -70, T. II, S -T. 11, G. 11. 527. Cáliz campanudo, de ordinario censado ^n el lx)ton; Tejeta- les trepadores ó bejucos, con hojas 2, 3-folioladas y terminíidas poT un zarcillo, 528. — Cáliz tubulado; hojas compuestas, dijitadas ó pi- nadas, sin zarcillo alguno, 529. •528. Yejetales leñosos, abejucados, de tallos largní&Tmos, ramo- sísimos, trepadores, lampiños oidiai ariamente y á ^'ec-es pubescentf'S, tomentosos ó alampiñados; con hojas opuestas, compuestas de 2 ó 3 hojuelas aovado-oblongas ú aorado-aguzadas, elípticas ó e'líptico- oblongas, enteras, lampiñas, pubescentitas por la cara supeiior j tomentoso-venotas por la infer-ior. Flores primorosas rosadas, rao- raduscas ó amarillas, en racimos, cimas, panojas y giupos termina- les ó axilares a'gunas veces, de cáliz monosc'palo truncado ú ondea- do,, otras veces con dientes mínimos, ó anchamente campanudo, oblicuamente 5-festoreado, cuyos festones son anchos; corola cam- panuda ó infundibuliforme con 5 lóbulos, frecuenteniente desigua- les, lampiña ó pubescente; celdillas de las anteras diverjentes; cápsula silicuiforme, llana, compiimida y marjenicida, mas ó menos larga y estrecha, con semillas aladas por combos estremos, situadas en una serie á lo largo de los bordes de la placenta planos, formando tabique, y paralelas con ella : big/ionia, F. 70, T. i, S. T. I. 629. Cáliz tubuloso únicamente; el quinto eítambre estéril j barbudo por el ápice; celdillas de las anteras diverjentes pendien- tes ó una "de ellas abortada, 530. — Cáliz tubuloso, de limbo ordina- riamente con dos labios eortitos, 531. 530. Primoroso árbol , ba&taiite grande y ramoso, de lindísimas hojas impaiibipinadas, cuyas [a'nulas son 4 á 8, con 8 á 17 pares de hojuelas oblicuamente romboídeo-oblongas, obtusitas y largas de 8'"-10"'; flores azules en panojas terminales, de cáliz pequeño 5- dentado, largo de 2'"-3"' solamente; corola campanuda por arriba de la base delgada, lampiña, larga de 1 li2'', con el limbo desigual- mente 5-lobo, Cápsula leñosa, llana y comprimida, loculícida, oval- redondeadita y escotada por el ápice redondeado, larga de 2" y .ancha de 8'" á 10'" ; semillas aladas insertas á lo largo de la línea media de las ventallas y paralelas á ellas, tabique apenas visible ó •abortado : Jacaranda, F. 70. T. II, S.-T. II, G. III. 531. Arboles ó arbustos raras veces trepadores, de ordinario lampiños, algunas veces tomentosos, de hojas compuettas opuestas, dijitadas ó imparipinadas, con escamitas ordinariamente dictantes ó desprovi^tas de ellas, foTmadas de 3, 5, 7, 8, 4, 6, hojuelas coriá- ceas, bastante tiesas, ó cartáceas, de f gura bastante variada y de ordinario lampiñas. Flores ordinariamente en corimbos terminales, (rosadas, blancas ó amarillas ; <]e cáliz monosépalo cuyo limbo es desigual, otras veces igual y 5-dentado; corola iní'undiljiílií'orme, ' cuyo tallo se va -gradualmente dilai ando, ó ventrudo por encima de ia base., con 5 lóbulos lijeramente desiguales. Celdilla» délas ante- iras diverjentes. Cápsula silicuiforme, loculícida, con semillas ala- das por los dos estremos, dispuestas en una sola serie á lo largo del VEJETALES HERMAFEODITOS MONOPETALOS: 2*79 borfle del tabique placentario y paralelas con él : teco7)ia, F. 70, T. II, S.-T. II, G. I. 532. C¿\p;ulas abriéndose con elasticidad j de dehiscencia locu- lícida, j con retináculos, 532 Ms. — Cnptulas abriéndose sin elastici- dad, y desprovistas de retináculos, 536. 532 lis. Cápsula cuyos retináculos nunca dentados son mas ó me- nos obtusos, 533. — Cápsula de retináculos escotados 2, 3-dentados. Plantas herbáceas ó sub-leño^as, con tallo 4-angular y lampiño ; hojas opuestas, simples, anchitas, serpeadas ó festoneadas, aovado- oblong-as, adelgazado-obtusas, obtusamente dentadas, aguzadas por la ba^e, pecioladas y rayadas superiormente. Flores color grana, sub-ternadas en ramitas mas ó menos alargadas, pedunculadas j como en cabezuelas, cuyas brácteas comunes lanceoladas y sentadas son mas largas que la cabezuela, mientras que las particulares ó propias, ovales, obtusas y enterí^imas, son mas cortas ; cáliz 5- partido, de lacinias subiguales, lineares y obtusas; corola sub-hi- pocrateriíbrme, de tubo encorvado que se vuelve garganta ó es an- gostamente obcónico, con el limbo sea mayor 5-partido, de lacinias abiertas y aovadas, sea menor enderezado, siendo entonces angos- tamente iníijndibuliforme la corola; e&tambres 4, algo esertos, mas rara vez algo mas cortos que la garganta é insertos hacia el ápice del tubo corto, pero hasta el limbo están casi apareados y membra- noso-ad heridos entre sí, cerca de la "división del limbo están libres de las fauces y siguen diadelfos todavía durante un trecho corto ; anteras oblongas cuyas celdas situadas en un conectivo mediocre y asaetado son diverjentes por la base. Estigma bilabiado , con los la- bios espesos y planos, cuyo superior es mas corto. Cáp.^ula contraida detde la base hasta el medio, sin celdas ni semillas tampoco, que están por encima de su parte media y en numeco de 8, 12, llanas : arrhostoccylum ó laderia, F. 72, Or. TI, T. I. 533. Celdillas de las anteras pai alelas, no diverjentes y siempre mochas, 533 lis. — Celdillas de las anteras moraduscas, paralelas, pero diverjentes por la base aflechada, mocha ó sub-mucronada. Plantas herbáceas de los lugares húmedos \ hasta algo pantanosos, de tallo derecho ó tendido y cuadrangular, con hojas opuestas, pe- cioladas, simples, entejérrimas, lanceoladas, oblongas ó algo íe^co- neaditas, con líneas densas por la cara superior, peludas ó lampinas. Flores axilares cimoso-aglomeradas, formando verticilos eniei'os y diminutos; brácteas pestañosas; cáliz tubuloso, semi-5-fido, con las lacinias iguales y por fin. 5-partido, con las divisiones pelierizadas o barbudas ; corola de garganta abierta, con el labio superior bííido, mientras el inferior, convexo y rugosito hasta el medio, es trífido. Estambres 4 didínamos, todos fértiles, á veces apareados por la base insertos en el tubo de la corola é inclusos. Ovario bilocular, con cel- dillas poliüvuladas, estilo simple con el estigma indiviso, alesnado y encorvado. Cápsula angosta, rol licita, 6-estriada, bilocular, poli- sperma, loculícido-bivalve, con las valvas medio septíferas, cuyas semillas pequeñas, circulares, comprimidas y lisas; retináculos cortos y obuisos : hy(jro;phyíla, F. 72, Or. II, T. VI. 533 his. Cápsula mas ó menos .sub-comprimida con 4, 24, 2 semi- 280 MÉTODO DICOTÓMICO. lias, cuyos segmentos de los tabiques se quedan adheridos á las val- vas, frecuentemente por fin reducidos por encima de las semillas, 534. — Capsula ovoidea con 8 semillas insertas desde la ba?e, con los segmentos de los tabiques separándose de las ventallas, 535. 534. Plantas herbáceas, con raices fasciculadas y algo tuberculo- sas, ó vejetales fruticosos, siempre vivaces, de tallos derechos, bas- tante ramosos y altos de 1 1[2' á 3', con hojas opuestas, cortamente pecioladas ó casi sentadas, simples, lanceoladas, ó lanceolado- oblongas, aovado-lanceoladas ó elípticas, lampiñas, alampiñadas y aveces pubescentes; flores axilares, racemosas ó en cimas axilares, de cáliz monosépalo 5-partido ó proíundamente 5-fido, subigual y mucho mas pequeño que la corola, con bastante frecuencia acompa- ñado de dos brácteas situadas por debajo de las flores laterales; co- rola infundibuliforme, azulada, mucho mas grande que el cáliz, de limbo casi igual : estambres inclusos, con las celdillas de las anteras paralelas : ruellia, F. 12, Or. II, T. VII. 535. Plantas herbáceas anuales ó sub-fruticosas , lampiñas ó alampiñadas, altas de V á 2', ramosas y con hojas opuestas, sim- ples, pecioladas, aovadas, aovado-lanceoladas, lanceolado-lineares, aguzadas; flores fasciculadas y dispuestas en espigas, so^tenidas por brácteas foliáceas y cruzadas; de cáliz 5-partido igual y bibractea- do; corola infundibuliforme, lijeramente arqueada y ca?i regular; estambres inclusos, de anteras con las celdillas paralelas : hlechum, F. 12. 536. Corola bilabiada, 537. — Corola nunca bilabiada; cápsula de dehiscencia loculícida, 542. 537. Corola enrodada, provista de apéndices sacciformes situados en su garganta; cápsula loculícida, 541. — Corola nunca enrodada ni con apéndices tampoco; cápsula no loculícida, 538. 538. Cáliz 5-partido. desigual, con el segmento superior mas an- cho que los laterales ; labio superior de la corola esterior en la pre- floracion, 539. — Cáliz 5-partido, con el segmento superior mas pe- queño ; cápsula con muchas semillas y picuda, 540. 539. Yerbecitas anuales ó vivaces de los lugares húmedos, cuyos tallos herbáceos, largos de 4" á 6", muy ramosos, son desparrama- dos, rastreros, arraigantes ó derechos, lampiños ó pubescentes; con hojas opuestas, pecioladas ó subsesiles, aovadas, lanceolado-lineares, ovales, espatuladas ú obaovadas, enteras ó aserradiías. Flores axi- lares cuyo pedicelo mas ó menos largo está algunas vtces provisto de dos brácteas situadas hacia el ápice; celdillas de las anteras para- lelas de ordinario, raras veces diverjentes: e;>tigma obturo, bífldo ó cabezudo. Cápsula con 2 ó 4 valvas separándose de la placenta cen- tral : herpestis, F. 68, S.-O. II, T. VII. 540. Planta herbácea anual, de tallo cilindrico, derecho, mas ó menos ramoso, alta de 3' á 5', según la riqueza del suelo en que ve- jeta, guarnecido de muchas hojas simples, pecioladas, alternas, ao- vado-lanc^>oladas, aguzadas, enteras ó un poco dentadas inCerior- niente. pubescentes y con puntitos por la cara infeiior, bastante grandes. Flores axilares, cortamente pedunculadas solitarias, con 2 estípulas situadas hacia la base del pedúnculo y saliendo de la i VEJETALES HERMAFEODITOS MONOPETALOS. 281 parte esterior de una glándula ; de cáliz con divisiones casi lineares y mucho mas corto que la corola blanca teñida de rosado y larga de 1" á 1[2", como campanuda, con 5 divisiones desiguales cuja infe- rior es mucho mas grande que las otras; estambres inclusos é inser- tos en el tubo corolar, en donde se observa un quinto filamento ru- dimentario. Pistilo formado de un ovario cónico j algo tetrágono, de cujo vértice sale un estilo que alcanza solamente la garganta de la corola y se termina por un estigma bífido, cuya división superior es algo mas larga que la inferior. Cápsula ovoídeo-oblonga, algo te- trágona ó con 4 surcos, un poco picuda con bastantes semillas angu- losas, y abriéndose por el ápice por 2 ventallas : sesamicm, F. "71, T. 1. 541. Plantas herbáceas anuales, lampiñas ó pubescentes, de tallo derecho, bastante ramoso y alto de V 1[2 á 2' algo mas ó menos ; hojas simples cuyas inferiores son opuestas y á veces todas, simples, oblongo-lineares, lanceoladas ó linear-lanceoladas, puntiagudas, redondeadas por la base, sésiles ó subsesilcs, sub-enteras ó un peco aserradas superiormente. Flores axilares ó en racimos flojos ; de cáliz monos'''palo 5-fido ó 5-partido ; corola violada muy hermosa, ancha de 6'" á 8'", con los lóbulos inferiores oblongos, obtusos y los apéndices cortos; celdillas de las anteras diverj entes. Cápsula glo- bosa loculícida por la base ; angelonia, F. 68, S.-Or. II, T. IV. 542. Corola rosada campanudo-infundibuliforme, con 5 lóbulos desiguales y los dos superiores interiores en la prefloracion; estam- bres inclusos y peludos, de anteras aproximadas por pares, 543. — Corola amarilla conniventc-campanuda ó sub-globosa, reticulada. con el limbo 5-fido oblicuo, cuyob 2 lóbulos superiores son esteriores en el botón; c-^tambres inclusos ni velludos ni con las anteras apa- readas, 544. 543. Planta herbácea, anual, áspera y un peco pelierizada, alta de l'-l 1[2', de tallo delgado y poco ramoso, con hojas opuestas, li- neares, bien enteras y largas de r'-2". Flores rosadas en racimos ó espigas terminales flojos, cuyos pedicelos filiformes son mucho mas largos que ellas, con 2, 1 bracteita situada hacia el medio ; cáliz casi mitad mas corto que el tubo '.orolar, infundibuliforme y casi lam- piño, con los dientes cortamente subulados. Estigma achatado y ob- tuso. Cápsula inclusa, ovoídeo-globosa ; gerardia, F, 68, S.-Or. III. T. II. 544. Plantas herbáceas derechas, ásperas, pelitiesas, creciendo parásitas en las raices de nosotros vejetales: la caña de azúcar espe- cialmente, que mata, de tallo tieso, poco ramoso y alto de 12" á 15"; hojas subsesiles, simples, opuestas, aguzadas desde la base sub-aco- razonada, aserrado-dentadas, híspidas y largas de 1 li2" á 2"; flo- res en racimos espiciformes terminales, axilares y collamente pe- dunculadas. Estilo encorvado terminado por ün estigma acliatado y obtuso; cáliz sub-globoso, anchamente 5-dentado, con el diámetro de 4"' á 5"'; corola inclusa ó cortamente eserta y poco abiertay amarilla : alectra, F. 68, S.-Or. II, T. VI. 545. Cáliz 5-fido y oblicuo : corola bilabiada con el tubo oblicua- mente campanudo, 546. — Cáliz espatáeeo 5-dentado, corola hipo- 282 MÉTODO DICOTÓMICO. crateriforme, de tuto largo, filiforme, campanudo superiormente, de limbo jijeramente bilaLiado, con jos segmentos subigiiales, 54*7. 546. Plantas herbáceas anuales, cuvo tallo poco ramoso se eleva á 3' ó 4' de altura, pubetcentet y algo TÍscosas ; hojas gi andes, todas opuestas ó solamente las inleriores, pecioladas, siujplcs, acorazona- do-reclondeaditas, sinuo^o-deutadas, y anchas de b" , cubiertas de pelos blancos \isccsos. Flores en racimos coitos ^aliendo de la dico- tomía, sea del tallo sea de los ramos, pedunculados y cu} o pedún- culo sale de la axila de una bráctca moiaduíca, ovoidea y cóncava; de cáliz 5-fido ó de 5 divÍ!;iones foliáceas y profundas, obtutas, des- iguales, aovadas y puntiagudas, con el tubo algo crecido; corola algo infundibuliforme anómala, de tubo muy coito, pero de gar- ganta grande, cuyo limbo abierto es 5-lobo, con segmentos redon- deados, de los cuales el inferior es mayor que los demás y los dos superiores mucho mas pequeño^; en la garganta se ob^ervan her- mosas njanclias pur[iúreas ó carme.-í, con la corola blauquecina. Estambres 4 ó á veces 2 solamente : hemos además observado un 5-estambre rudimentario. Ovario oval algo comprimido y cónico, pubescente, de cuyo vértice sale un estilo simple, filiforme y termi- nándose por un estigma con dos láminas apartadas una de otra y formando así una boca, pero que se cierran después de cojido el po- len. El fruto es una especie de drupa leñosa, cuya cátcaia carnuda y poco e.-pesa no taida en detprender>e y se queda entonces una es- pecie de cápsula leñosa negra, achatada, oblicuamente semi-elí[itica, mucho mas larga que su pico ganchoso, medianícida, en 2 venta- llas, 4-locular, con una sola semilla en cada una : mar ty ida, F. 71, T. II. 547. Plantas herbáceas vivaces, cuyo tallo, alto de 2 lf2 á 3^ muy ramoso, sale de una raiz carnuda, perpendicular, bastante gruesa, peludo-viscosas y exhalando i,n olor almizclado caracterís- tico; hojas simples, cuyas infeiiores son opuestas y las supeiiores alternas, largamente j^ecioladas, aoorazcnado-redondeadas, palma- tíñdas, con los lóbulos deutado-^^inuo^os, cubiertas de mucho pelo algo tieso y terminado por una glandulita. Primoro¿as flores, color blanco teñido de rosado, grandes y con lindítinjas manchas moradas situadas en el interior de la garganta abierta, en espigas ó racimos simples paucífloros, axilares ó saliendo de la dicotomía de los ramos, pedunculadas y cuyo pedúnculo nace de la axila de una bráctea fo- liácea, algo cóncava, lanceolada, puntiaguda y larga de 4'" á 5"^ articulado y con dos bracteitas, semejantes á la ya mencionada y situadas como á 4 líneas de la inserción de la fior ; de cáliz monosé- palo, espatiforme, ovoideo, Ijeridido solamente de un lado, con 5 dientes en el ápice, provisto además de 12 á 15 estrías longitudina- les al;jo calientes de color rojo oscuio y que van desdecía base hasta el ápice ca^i sin ramificarse, largo de 1" á 1 li2"; corola de tubo larguífcimo, 6'^ á 7", arqueado antes de la floración, de tal manera que el limbo no abierto repre^entíi entonces una especie de cabeza pentágona aplicada al lado del ovario ; se endereza poco á poco y sale por la hendidura del cáliz, entonces abierta la corola es grande y recta, de limbo con 5 divisiones planas redondeadas y un poco YE JÉTALES HERMAFRODITOS MONOPÉTALOS. 283 desimánales, de g'aTg'anta grande y aloierta un poco pent'gori'a como el lubo que la lleva. Estambres insertos en el tubo, aproximfindose todos de la parte supeiior de la garganta y quedándose en el Ing^r correspondiente al ¡seno que separa los dos segmentos ■superiores del limbo, con anteras med i i fijas, cuyas celdas muy grandes están dispuestas por pares una por encima de la otra, pendientes antes de la fecundación y erguidas después. Ovario cónico un poco com- primido, fcOstenido por un disco hipojínico 'bastante desarrollado, con un surco de cada lado, que se continua sobre el ovario, de cuyo vértice ^ale un estilo filiforme muy largo terminado por un estigma lameliforme y que viene á parecer por encima de las anteras, con figura de lanza; tal ettilo dura todavía algún tiempo después de des- prendida la corola. El fruto consiste en una especie de drupa cuya corteza ¿e desprende, y entonces se queda una especie de liueto in- dehi:bcente, prieto, muy duro, semí-elíptico, achatado y terminán- dose por una punta ganchosa formada de dos cuernecillos que se í&epai an poco á poco uuo del otro, según la sutura lonjitudinal y me- diana, con dientecitos por donde sin duda han de salir las semillas • únicas en cada celda : cniniolaria, F. 11, T. II. 548. Fruto drupáceo, 5-19. — Fruto abayado, 552. 549. Pequeñas drupas bilocr.lares, agrupadas algunas -en el cen- tro del involucro y contenidas cada una en el cáliz acrescente ; co- Tola bilabiada y con el limbo abierto ; flores reunidas en cabezuelas esféricas pedunculadas, 550. — Una drupa única ordinariamente con 4 semillas, aovada y larga de 5'" ; corola tubulosa bilabiada, peluda interiormente, con el labio inferior doblado hacia abajo, 551. 550. Arbustos aromáticos con ó sin aguijones, muy ramosos, altos de 3' á 6', raras veces plantas herbáceas, con hojas simples, pecio- ladas, peninervias, ásperas, pubescentes, peludas, alampiñadas y rara- veces lampifias, opuestas, aovadas ó aovado-oblongas, ovaleé, ■aovado-lanceoladas ó lanceolado aguzadas, elípticas ó elíptico oblon- gas, etc., puntiagudas, obturas ú obtusitas, festoneadas ó aserrado- dentadas. Flores en cabezuelas pedunculadas y aisilares, con la base del pedúnculo acompañada de una bráctea foliácea mas ó menos desarrollada: de cáliz mono.épalo 2 ó 4-dentado, pequeño, tubulado y con dientes obtusos; corola largamente tubulosa, con la garganta abierta y el limbo entendido y llano, partido en 4 segmentos bas- tante pi ofundos, obtusos y detig-uales, amarillenta ó rojiza; Ofctam- bres inclusos, con las celd-as de las anteras paralelas. Ovario úuico esférico, 2-locular uniovulado, de cuyo ápice sale un estilo simple terminado por un estigma oblicuamente cabezudo. La fruta es una drupa pequeña, esférica, lisa, prietay de hueso bilocular : lantana, F. 7o, T. I, S.-T. I, G. 11. 551. Arbolito muy ramoso, alto de 15' á 20', lampiño, de hojas .simples, alternas, ca^si sentadas, lanceolado-aguzadas, largas de 4"- 2", esparcidas y enteras, coriáceas, de un hermoso color verde y lutetrosas. Flores axilares, amarillas, solitarias, situadas en especial kácia el vértice de las ramitas; pediceladas y de cáliz monocépalo 5- panido, pequeño, campaniforme, lari:o de 1"^- y pcbl añoso ; corola bilabiada, amarilla, disciplinada de purpúreo, larga de 10"'-12"', 284 MÉTODO DICOTÓMICO. cuyo labio superior es recto y escotado, mientras el inferior al con- trario tripartido, es algo doblado hacia abajo. Estambres inferiores esertos. Ovario bilocular, cuyas celdas contienen 4 óvulos separados por un tabique longitudinal incompleto, dispuestas por pares situa- das la una por encima de la otra, de cuyo ápice sale un estilo ter- minándose por un estigma obtuso y bífido. Drupa aovada, amari- llenta y puntiaguda : bontia, F. 73. 552. Fruto abayado de ordinario, pero á veces capsular y con dos valvas; algunas raras veces 5 estambres, 553. — Fruto siempre aba- yado ; siempre 4 estambres didínamos, 554. 553. Arbustos ó árboles bajitos, ramosos y que se elevan hasta 25' de altura, de hojas simples, algo pecioladas, alternas, elípticas, elíptico-oblongas ú obaovadas, lanceolado-oblongas, puntiagudas ú obtusas, con frecuencia venosas, lampiñas. Flores de ordinario so- litarias, terminales ó laterales, de cáliz 5-r ¡:tado ó 5-fido, campa- nudo; corola hipocrateriforme, doblada t el botón, con 5 lóbulos lijeramente desiguales, redondeados, imbricados y cuyo superior se ha vuelto esterior. Estambres inclusos, de anteras reniformes, con las celdillas confluentes. Ovario globoso, de cuyo ápice tale un es-- tilo simple, cilindrico y cuj'o tamaño va creciendo hasta el estigma bastante grueso y bilabiado. Baya esférica amarillo-anaranjada, unilocular y polisperma : hrunsfelsia, F. 67. 554. Baya corticosa, pero nunca leñosa, de tamaño regular, larga como de 1"; cáliz campanudo, 555. — Fruto muy grueso, de casco leñoso muy fuerte, de figura y tamaño muy variados; cáliz de dos sépalos, 556. 555. Arbustos sarmentosos ó trepadores, ramosísimos y de hojas opuestas, compuestas de 2 ó 3 hojuelas membranosas ó coriáceas aovadas, elípticas ú ovales, obtusas, ó con una punta obtusita y lampiñas, largas de 3"-4"-5". Flores en corimbos axilares y termi- nales, con algunas flores de cáliz tubuloso-campanudo y sub-trun- cado, cerrado en la yema; corola iní'undibuliforme, larga de 4''-6"- 7"-8" y blanca, de tubo elongado, filiforme y claviforme á la vez, enteramente pubescente, con los lóbulos aovados, aovado -oblongos y obtusos ó deltoídeos, puntiagudos y ondulosos ; anteras de celdi- llas diverjentes, de las cuales dos son esertas ; ovario bilocular de cuyo vértice sale un estilo terminado por un estigma bilamelado. Baya oblonga, larga de 1" : tanoecium, F. 69, T. 11. 556. Arboles bajitos ó de mediana altura, ramosísimos, lampi- ños, de copa dispuesta á manera de paraguas, cu^'as ramas cilindri- cas y en varita son de ordinario todas horizontales; hojas simples, alternas ó fasciculadas, largas de 8"-4", subsesiles ó cortamente pe- cioladas, espatuladas, obaovado-oblongas ú oval-oblongas, cartá- ceas ó ríjidas, lustrosas, enteras y obtusas. Flores bastante grandes saliendo del tronco y de los ramos, formadas de un cáliz deciduo, 2-partido ó 2-íido ; corola campaniforme, transversalmente plegada por su parte inferior, de limbo desigualmente 5-fido ó sub-entero, con lóbulos dentado-ondulosos, larga de 3" á 2''. Estambres inclu- sos é insertos en el tubo de la corola, en donde se halla á veces un quinto estambre rudimentario ; pistilo compuesto de un ovario ovoí- VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPETALOS. 285 deo. ciiva base está envuelta en un disco amarillento bastante ancho j algo carnudo, de cuyo ápice sale un entilo simple algo mas largo que ía corola terminándose por un estigma bilamelado. Baya mas ó menos gruesa, indehiscente y de casco leñoso muy duro, de color verde amarillento cuando madura, lampiña y lustrosa, de forma y tamaño muy variados, unilocular, conteniendo muchas semillas comprimidas y acorazonadas, anidadas en el trofospermo que se ha vuelto una pulpa abundante : cresce?itia, F. 69, T. II. 557. Fruto drupáceo, 558. — Fruto no drupáceo, 561. 558. Siempre 4 estambres, 559. — De ordinario 4 estambres, pero algunas raras veces cinco, 560. 559. Arbustos muy ramosos, altos de 3' hasta 12', con ó sin agui- jones; hojas simples, opuestas, elípticas ó elíptico-lanceoladas, en- teras, de base aguzándose hasta volverse peciolo, ó aovado -deltoí- deas, desigualmente dentadas y largamente pecioladas, cuyo peciolo está articulado hacia la base, cartáceas ó membranosas, lampiñas ó pubescentes. Flores en cimas tricótomas, axilares, pedunculadas, 1, 3-floras, con los pedicelos estendidos, ó terminales, subiíesiies y con- traidas ; de cáliz 5-fido ó 5-dentado, raras veces troncado; corola hipocrateriforme ó infundibuliforme, con el tubo delgado y los 5 lóbulos del limbo algo desiguales; estambres esertos y desiguales ; estigma cortamente bífido, con los lóbulos puntiagudos. Drupa con 4 hue>ecitos, ó 3 y solamente 1 por causa de aborto, uniloculares monospermos, á veces apareados : clerodendron, F. 75, T. III. 560. Arboles altos hasta de 50', ó arbustos, muy ramojos, y cu- yas ramitas son de cuatro caras; en los árboles el epidermis color de ceniza se desprende de ordinario en tiras muy largas y desigua- les ; hojas simples, opuestas, pecioladas, enteras, cartáceas ó raras veces membranosas y coriáceas, lustrosas y lampiñas, con las veni- tas formando redecilla visible por arabas caras, ó solamente por la inferior en donde forman arcos; obaovado-oblongas, eliptical-oblon- gas ó elípticas, lanceolado-oblongas, oblongo-lanceoladas, etc., mas ó menos obtusas. Flores olorosas blancas ó amarillas, en racimos espiciformes ó en espigas, sub-sentadas ó cuyos pedicelos son masó tan largos como la bráctea de cuya axila salen; flores esparcidas en el eje ó dispuestas por grupos, de cáliz monosépalo, troncado, como campanudo y de limbo 5-dentado ; corola hipocrateriforme, mas larga que el cáliz, de tubo corto y cuyo limbo está partido en 5 seg- mentos bastante profundos, iguales, obtusos, con pelo blanco por los bordes y en la garganta. E«tam'! >< s inclusos y tapados por el pelo, iguales, cuyos filamentos corto.- é insertos hacia la base de la gar- ganta llevan anteras aflechadas y basifijas. Ovario pequeño, casi globoso, liso, verdusco y lustroso, de cuyo ápice sale un entilo casi tan largo como los estambres, verde, cilindrico y que se termina por un estigma pequeño, oblicuo, de bordes glandulosos y violáceos, con una depresión en el centro. Drupa pisiforme prieta-moradusca. con dos huesecitos erguidos, cuya reunión forma una pirámide central: cada huesecito es bilocular ó á veces unilocular por causa de aborto : citharexylum, F. 75, T. I, S.-T. II. 561. Un tetraquenio, 562. — Fruto capsular, 565. 286 • MÉTODO DICOTÓMTCO. 56*2. Corola büabiada, con el lóbulo inferior encorvado; estam- bres arqueados é inclinados, 563. — Corola no labiada; estambres derechos y diverjentes, 564. 563. Vejetales de ordinario herbáceos, mas ó menos ramojos, comunmente muy aromáticos, cuyo tallo de 4 caras se eleva desde r á 8' de altura, con hojas simples, opuestas, pecioladas, aovado- lanceoladas, aovaxio-oblong-as, elíptico-oblongas, aovadas, ag^nzadas ó puntiagudas, festoneadas ó aserradas, de base redondeada ó aco- razonada, pubescentes, peludas ó alampiñadas ; las. hojas florales mucho mas pequeñas son oblongo-lineares, lanceolado- fvgnzadas, aovadas, elípticas, elíptico-oblongas, muy pequeñas y setáceas, mas largas ó mas cortas que los verticilos que acompañan, las mas veces inclinadas. Flores sentadas en los verticilos formando espiga termi- nal, ó en cabezas axilares, ó cuyas cabezuelas son dispuestas en ra- cimos, ó por fiti subsesiles ó pediceladas y en cimas contraidas, de cáliz monosépalo 5 dentado ó 5-fido ; corola con el labio inferior in- clinado ; nquenios sin la márjen cóncava : hyptis,. F. 76, T. VII, S.- T. I, G. T. 564. Plantas herbáceas anuales ó vivaces, de tallos rastreros 6 derechos, pubescentes ó alampiñadas, con hojas simples, G¡iue¿tas, pecioladtis, enteras ó festoneadas, á veces aserradas, pubescentes ó alampiñadaS; á veces lampiñas. Flores pequeñas en verticilos axila- res que bailantes veces forman espigas terminales, con hojas flora- les mas ó menos desarrolladas, de cáliz cilindrico, campanudo ó tu- bulado, con 5 dientes casi iguales, á veces simulando dos labios, y cuya garganta está tan pronto desnuda como provista de pelo ; corola infundibuliforme, algo mas larga que el cáliz, tubulada, de 4 divi- siones ca^i iguales, obtusas y derechas, cuya superior algo mas grande que las demás es escotada ; estambres rectos, distantes, de filamentos lisos y lampiños, y cuyas anteras tienen las celdillas pa- ralelas; estdo filiforme mas largo que la corola, terminado por un estigma bífido : meiitha, F. 76, T. II, S.-T. VIL 565. Fruto comprimido, coriáceo, por fin abriéndose en 2 valvas", con una sola semilla por causa de aborto ; embrión desnudo, germi- nando en el fi'uto, 566. — Una cápsula lejítima ó un pixidio, 567. 566. Arboles bajitos de los sanitralesy manglares, con ramos de- rechos, de 4 caras, en forma de varita, mas ó menos blancos y lam- piños; hojas opuestas, simples, enteras, lanceoladas ó lanceolado- elípticas, aguzadas ú obtusitas, coriáceas, de cara inferior como cubiertas de polvo blanco ó alampiñadas. Flores blancas en racimos axilares y derechos en la sumidad de las ramitas ; de cáliz monosé- palo 5-partido ; corola sub-en rodada, con 4 lóbulos lijeramente des- iguales , pubescente por ambas caras; estilo tan largo como los estambres. Embrión de raicilla inferior y ascendente entre los cotiledones: aviceiinia, F. 75, T. II. 567. Un pixidio, 558. — Una cápsula lejítima, 569. 568. Planta herbácea con hojas simples bastante grandes todas radicales, arrosetadas, lanceoladas,, basinervias; flores muy peque- ñas en espiga cilindrica ocupando la parte superior de un pedúnculo axilar y radical que parece boj ordo y largo de 6" á 8", y de cáliz 4- VEJETA LES IIEUMAFRODITOS MONOPÉTALOS. 287 partido; corola cnadrífida ó hipocrateri forme membranosa de limbo estendido v alg'o doblarlo hí\cia arriba, se desprende/ se cae de una sola pieza llevando consigo los estam'bres iosertos en sw twbo^ de fi- lamentos largo-s, delgados, esertos y con anteras bastante grandes. Ovario globoso de eiijo ápice sale un e.4ilo mas corto q.iie los estam- bres, terminado por un estigma lateral '.plantado, F. 11. 569. Cuatro ó cinco estambres; cápsula loculícida ó septícida, cuadrivalve, 570, — Siempre 4 estambres, 571. 570. Frútices mas ó menos ramosos, alampiñados, peludos ó lam- piños, raras veces pubescentes, que se elevan á 2' ó 5"" de altura, con hojas simples, alternas, cortamente pacioladas, elíptico-lanceoladas ó elíptico-oblongas, lanceoladas, aguzadas ó no, aberradas por en- cima de la bai^e ó del medio, otras veces sub-enteras. Floreo axila- res, de ordinario mellizas, cuyos peale un estilo si^iiple bastante largo, terminado por un estig- ma esférico: cápsula casi ,í?lobosa. poli.-perma, con un surco de cada lado: scoparia, F. 68., S.-Or. III, T. VI, G. II. 573. Anteras aflechadas, rectas y esertas; cápsula semi-4-'ocular, bivalve, cuyas semillas marjinales son situadas sobre las valvas in- clinadas por adentro, 574. — Anteras no añechadas, mas cortas que el limbo de la corola, rectas y resostadas; c.lpsula unilocular, con las semillas marjinales situadas en las valvas lijeramente dobladas por adentro, 575. 574. Plantas herbáceas anuales, de tallo en forma de varita, alto de 1' á 3', con hojas simples, opuestas, sentadas, oblongo-lanceola- das y redond-^aditas ó acorazonadas por la base algo envainadora. Flores blancas ó rojizas en espigas ó racimos, y acompiñadas de 3 brácteas aproximadas á ellas ó cuya inferior está algo mas distante; de cáliz monosépalo4-fido3 ó 2 braoteblado, con las divisiones igua- les y algo puntiagudas: corola cortamente hipocrateri forme, mar- cescente, 4-dentada; estambres «insertos en su garganta al pi^í de una escamita, con filamentos muy cortos. Ovario oval de cuyo ver- 288 MÉTODO DICOTÓMICO. tice sale un estilo capilar mas largo que la corola, deciduo y termi- nándot;e por un estigma bilamelado : coidoiibea, F. 64, T. VII. 575. Plantas herbáceas anuales, cuyo tallo tetrágono se eleva á 6" y 10" de altura, poco ramo:^o, derecho, con hojas simples, opues- tas, oblongas, lanceoladas ó lineares, ó lanceolado-lineares; flores en cimas terminales ó solitarias, rosadas, purpúreas ó á veces ama- rillas, acompañadas de 2 brácteas situadas por debajo de la cima dicótoma, paucíflora ; de cáliz monosépalo 4, 5-fido, cuyo tubo es 4, 5-alado ó aquilado, alas transversal mente venosas, semi-ovales ó semi-lanceoladas ; corola infundibuliforme marcescente, de lóbulos anchamente redondeados ó sub-troncados, bastante grande; fila- mentos provistos inferiormente de 2 dientes ó subulados por la base. Estilo deciduo terminado por un estigma bilamelado ó globoso : scMilttsia, F. 64, T. II, S.-T. I, G. II. 576. Un ovario único, 577.— ^Algunos ovarios, 642. 577. Fruto seco ó capsular, 578. — Fruto mas ó menos carnudo, drupáceo ó abaj-ado, 602. 578. Vejetales lechosos, 579. — Vejetales nunca lechosos, 584. 579. Cápsula unilocular, erizada, con semillas aladas, 580. — Cápsula 2, 4-locular, 581.. 580. Arbusto de ramas largas, delgadas, muy largas y como sar- mentosas, lampiño, de hojas simples verticiladas, elíptico-oblongas ú oblanceoladas, puntiagudas, de costilla algo peluda por la cara in- ferior; ñores amarillas, primorosas, en racimos paucífloros, axila- res ó terminales, pedunculadas y de cáliz monosépalo 5-partido; corola laiga de 3"-4", de tubo infundibuliforme largo de 1", repen- tinamente dilatado, con 5 lóbulos algo desiguales y redondeados ; estambres inclusos, insertos en la garganta de la corola, pero cuya inserción parece salir del tubo y está señalada por una línea de pelos blancos, separados los unos de los otros por un grupo triangular de pelo blanco, sostenido por una escamita bipartida: anteras casi sen- tadas}^ aflechadas. Ovario oval, sentado sobre un disco anular, uni- locular, poliovulado, de cuyo ápice sale un estilo filiforme muy largo terminado por un estigma carnudo, un poco e;trechado por la parte mediana, con figura como de hisopo y terminado por dos pun- titas. Cápsula orbicular, algo comprimida, coriácea, con largas púas, abriéndose por dos ventallas abarquilladas, polisperma, cuyas semillas discoideas, imbricadas y situadas por la márjen de las ven- tallas tienen sus bordes membranosos : allamanda, F. 63, T. I, S.- T. I. 581. Ovario 2, 4-locular, con 4 ó 6 óvulos ; estigma 2, 3-lobado y cabezudo á la par, rara vez cabezudo solamente, 582. — Ovario 2- locular, con 4 óvulos; estigmas 2, diverjentes, filiformes ó clavi- form e-oblongos, 583. 582. Plantas herbáceas raras veces sub-fruticosas, anuales ó las mas veces vivaces y de raiz no rara vez tuberculosa, de tallos lar- guísimos, ramosos y volubles ó bolamente trepadores, con hojas simples, alternas, pecioladas, enteras, ó mas ó menos lobuladas, de tamaño y de forma muy variados. Flores de ordinario bastante grandes : sin embargo las hay pequeñas, solitarias y axilares ó en VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPETALOS. 289 racimos axilares ó terminales, de cáliz monosépalo, con 5 divisiones mas ó menos profundas é iguales, grandes, escariólas y por fin car- tilajinosas, ó membranosas y por fin coriáceas, otras veces membra- nosas solamente, pero terminadas algunas veces por un apéndice filiforme j herbáceo, y por último foliáceas y aguzadas; corola grande infundibuliforme ó campanuda y de tubo ancho dilatado por la base ó no, otras veces ventruda por arriba de la base, ó pequeña y campanudo-infundibuliforme ó claviforme-infundibuliforme, dis- minuyendo gradualmente hacia la base, otras veces es hipocrateri- forme mas o menos grande, con el tubo cilindrico, ó tubuloso-hipo- crateriforme con el tubo sea cilindrico, sea claviforme; estambres de anteras ordinariamente inclusas : sin embargo bastantes especies hay que las tienen esertas. Cápsula reventándose de manera que las valvas se separan de los tabiques : ipomcea, F. 65, T. IV, S.-T. I, serie V.-C. G. I. 583. Plantas herbáceas anuales ó vivaces, volubles, lampiñas ó pubescentes, de hojas simples, alternas, pecioladas, enteras ú on- deadas, acorazonado-aovadas, ovales, oval-redondeadas, lanceolado- lineares, obtusas, escotadas ó mucronadas; flores mas ó menos grandes, pedunculadas, solitarias y axilares ó en racimos axilares ó terminales, y de cáliz monosépalo persistente con 5 divisiones mas ó menos profundas é imbricadas; corola infundibuliforme, de pre- floracion torcida, con 5 ángulos correspondiendo con sus pliegues ; estambres cortos, inclusos, insertos en el tubo de la corola, des- iguales y con anteras aflechadas. Ovario globoso, de cuyo vértice sale un estilo filiforme terminado por dos estigmas diverjentes. Cápsula abriéndose por 2, 4 y haaia 8 valvas, bilocular, cuyas semi- llas son myosas, mas ó menos angulosas y á veces provi&tas de una ala estrecha : convolvulus, F. 65, T. IV, S.-T. I, serie V.-C. G. III. 584. Vejetales sin hojas y como parásitos, 585. — Vejetales con hojas siempre y nunca pareciendo parásitos, 586. 585. Plantas herbáceas de semblante particular y característico, cuyos muchísimos tallos delgaditos, ramosísimos, pareciendo larguí- simo> fideos, tanto por el color y el tamaño como por la forma, se arrollan y enredan de mil manei'as en los vejetales vecinos que han elejido para vivir, de tal manera que á veces les hacen desaparecer y hasta acaban con ellos. Flores pequeñas blanquecinas en grupos laterales, mas ó menos pediceladas y acompañadas de 2 brácteas, y de cáliz monosépalo 5 ó raras veces 4-fido, cuyos segmentos son iguales y algo imbricados ; corola cortamente campanuda ó enroda- da, mai'cescente, de limbo 5, 4-partido, de prefloracion imbricada; estambres 5, insertos en la garganta de la corola, tan largos como ella, alternos con sus divisiones y provistos de un apéndice escami- forme situado por la base, inclusos ó proeminentes. Ovario globoso, bilocular y biovulado, de cuyo ápice salen dos estilos terminados cada uno por un estigma cabezudo. El fruto es un pixidio y raras vecesuna cá|)sula algo abayada ; embrión indiviso y en espiral : ciís- cuta, F. 65, T. I. 586. Fruto capsular lejítimo, 587. — Fruto capsular no muy le- jítimo, 590. TOMO I 19 290 MÉTODO DrCOTÓMICO. 587. Unilociüar, indehiscente, con semillas suturales; corola en- rodada, decidua, de segmentos induplicativos y franjeados ó pelu- dos, 588. — Cápsula uni ó bilocular siempre dehiscente, 589. 588. Yerba TÍvaz de los lugares húmedos y anegadizos, con una especie de rizoma del tamaño del dedo índice, largo como de V\ cilindrico, de color moreno esteriormente, con surcos ó estrias cir- culares, blanco-amarillento interiormente; de su parte inferior sa- len raices simples del tamaño del cañón de una pluma de gallina, blancas 6 parduscas esteriormente, esponjosas, lai-gas y provistas de muchas raicillas capilares mas ó menos cortas y blancas, mien- tras que de su vértice nacen bastantes hojas, cuyo peciolo, largo como de unas 6" á 8", casi cilindrico, lampiño, de ba:;e algo mas desarrollada y algo envainadora, tendido en el suelo húmedo ó de- recho cuando anegado, llevando un limbo acorazonado -orbicular, bastante doble, sin ser carnoso, liso, lustroso y lampiño, de cara superior verde-amarillenta, con la costilla y nervaduras poco nota- bles por causa de su coloralgomas pálido, mientras la inferior, mas pálida, las tiene bastante pronunciadas y es como glandulosa ó es- ponjosa; tales hojas radicales y alternas, acorazonadas ó abroquela- •das, salen derechas, con sus dos lados enrollados, de tal manera que . parecen como aflechadas de un hermoso color de rosa, son anchas de2"-2 ll2"; del vértice y de la cara superior del peciolo salen su- cesivamente 2 á 5 flores, acompañadas de una bráctea membranosa, cuyos pedicelos desiguales son derechos, largos de como 10'" ó 12'" y unifloros; de cáliz 5-paT'tido, cuj^os segmentos oblongo-lineares son como dos veces mas cortos que la corola, trabados por la base, y algo mas largos que la cápsula; corola enrodada, decidua, blanca, con el tubo amarillo, cara superior de las divisiones ornada de mu- chas franjas ó apéndices capilares, blancos y maijinales, que des- aparecen en la garganta, para volver después á presentarse en el tubo, hay algunas glándulas pediceladas en la base. Estambres in- sertos en el tubo de la corola, inclusos, de anteras erguidas, rectas, introrsas y moraduscas, formando una especie de bóveda por enci- ma del estigma que aparece en el fondo de la flor como una estre- llita de muchos brazos, pero observado con mas cuidado se ve que es casi sentado, bilobo, con cada lóbulo crestad(>. Ovario unilocular en forma de botella, lustroso, lampiño, color verde teñido de par- dusco, cuya base está cargada por 5 glándulas ó nectarios hipojíni- cos, alternos con las divisiones del cáliz en el fondo del cual están situadas, irregularmente cuadrangulares, elongadas, separadas las unas de las otras, de color como dehollin desleído, un poco mas oscu- ro por el vértice, provisto de unos pelos blancos cortitos y muy finos; tales glándulas tienen como 1|4 de linea de largo. Cápsula sin ven- tallas , unil-ocular, polisperma y cuyas semillas suturales son globosas, lisas, algo aquilladas, reventándose al favor de la ma- ceracion en el agua. Por la cara inferior del peciolo, al nivel de su vértice, cuando no salen flores por su cara superior, entonces nacen raices que penetran en el suelo, y en lugar de flores se pre- senta una planta nueva, y á medida que crece se va marchitando el limbo de la hoja madre que no tarda en desaparecer enteramente, YEJETA.LES HERMAFRODITOS MONOPETALOS. 291 j entonces solo se queda el peciolo que la tiene unida á la planta madre, que á primera vista parece cundidora : Iim/ia?ithemum, F. 64, T. I. 589. Cápsula no lejítima, pero pericarpio membranoso, reven- tándose por la base; cáliz tubuloso, 5-costilludo, con glíndulas esti- pitadas situadas especialmente sobre los ángulos, esféricas j pega- josas, 590. — Cápsula lejítima, 591. 590. Arbustos sarmentosos, lampiños, cuyos ramos muy largos, delgados y rollizos, son estendidos y llevan hojas simples esparcidas y alternas, mas ó menos pecioladas, enteras, aovadas ú oblongo- lanceoladas, aguzadas ó puntiagudas. Flores blancas á veces teñidas de color de rosa ó azules en espigas terminales, cuya reunión forma á veces panojas arracimadas, de pedúnculo corto saliendo de la axila de 3 brácteas alternas, foliáceas y pequeñas casi iguales, pero cuya inferior es frecuentemente algo mayor que las demás; de cáliz monosépalo, tubulado, oblongo, pentágono, 5-dentado, cuyo tubo lleva glándulas situadas hacia la base de sus ángulos convexos, mitad mas corto que el tubo filiforme de la corola hipocrateriforme, con 5 lóbulos mucronados, cuya garganta es desnuda ó provista de pelo. Estambres inclusos, hipójinos, alcanzando apenas la garganta de la corola. Ovario pequeño, algo fusiforme, sentado en medio de un áñ.co anular, unilocular, poliovulado, y de cuyo ápice sale un estilo capilar simple, muy largo y terminado por 5 estigmas ergui- dos, filiformes é inclusos : plmiihago, F. 78, T. II. 591. Cápsulas uniloculares con las semillas marjinales en las val- vas, 592. — Cápsulas biloculares, 595. 592. Enteramente unilocular ; anteras erguidas, derechas y cor- niculadas por el ápice, 593. — Unilocular, pero hasta la mitad bi- locular, 594. 593. Plantas herbáceas vivaces, de tallo un poco áspero y que se eleva á l'-3' de altura, con hojas opuestas, simples, elíptico-lanceo- ladas y acuminadas por ambos estremos, trinervias y largas de 2"- 4". Flores agrupadas 3^ axilares compuestas de un cáliz monosépalo 5-fido, cuyos lóbulos subulados y esparramados son casi tan largos como la cápsula ; corola infundibuli forme, azul, marce^cente y larga de 3"; estambres inclusos y alternando con los dientes. Estilo deci- duo terminado por un estigma cabezudo : slevogtici^ F. 64, T. II, S.-T. IV. 594. Yerba anual, glauca, erguida y alta de 1' á 2', con hojas simples, opuestas, elípticó-oblongas, algo acorazonadas y abrasado- ras, por consiguiente sentadas; flores azules ó blancas disciplinadas en cimas terminales paucífloras, de cáliz 5 ó á veces 6 -partido; co- rola infundibuliforme y enrodada á la par, marcescente, cuyos seg- mentos elíptico-lanceolados y apendiculados son dos veces mas largos que el tubo campanudo. Anteras incumbentes y por fin recorvadas. Estilo tarde deciduo, terminándose por un estigma bilamelado : eus- íomíí, F.64, T. II, S.-T. IV. 595. Enteramente biloculares, 596. — No del todo biloculares, 601. 596. Formada de 2 carpelos abriéndose á lo largo de la línea dor- sal, dídima, libre y por ñn separándose del disco vuelto duro y que 292 MÉTODO DICOTOMICO. se queda casi con forma de escudo, 597. — Nunca dídima, ni forma- da tampoco de 2 carpelos bien distintos, 598. 597. Yerba anual, cujo tallo ordinariamente simple ó á veces algo ramoso y dereclio se eleva á 8"-12" de alto, con 4 caras, lampi- ño, que lleva 2 ó 3 pares de hojas simples opuestas, aovado-lanceo- ladas, aguzadas, dispuestas á manera de cruz ó casi verticiladas por á cuatro por estar dos pares muy aproximados el uno del otro en el vértice del tallo ó de sus divisiones, de las cuales 2 son mas an- chas y mas largas que las demás; del medio de la especie de involu- cro que forman así salen de 2 hasta 4 espigas simples, delgadas, estendidas horizontalmente ó arqueadas, formadas de flores peque- ñas, rotadas, unilaterales y distantes, de cáliz monosépalo persis- tente, con 5 divisiones profundas, lineares y subuladas; corola in- fundibuli forme , con 5 lóbulos profundos de prefloracion valvar, como unas cuatro veces mas larga que el cáliz, con el tubo algo cre- cido y anguloso superiormente; estambres inclusos de filamentos cor- tos é insertos en la garganta de la corola y alternando con sus divisio- nes, de anteras oblongas y como cabezudas, converjentes; estilo simple mas largo que la corola, articulado hacia su parte mediana y torcido hasta el ápice, que se termina por un estigma cónico. Cáp- sula dídima, rugosa y erizada, cuadiivalve y oligosperma; después de su caida se ve en el fondo del cáliz una especie de cápsulsurom- boídea, leñosa, persistente en que estaba sentada , formada por el disco endurecido, envuelta por las divisiones calizinales : spigelia, F. 61, Or. I. 598. Cápsula septícida, de valvas bífidas, con muchísimas semi- llas, muy pequeñas, prietas é irregulares : abierta ofrece 4 puntitas en su ápice, 599. — Cápsula bilocular por causa de estar las valvas dobladas hacia dentro, cuyos bordes cargan con las placentas, en las cuales muchas semillas están imbricadas, 600. 599. Plantas herbáceas anuales, pubescentes, viscosas y exha- lando un olor viroso particular, cuyo tallo recto, poco ramoso y ci- lindrico se eleva á 3'-5' pies de altura, con hojas simples, sentadas, alternas, decurrentes, oblongo-lanceoladas, un poco aguzadas por ambos estremos, largas de V á 3' y anchas de 4'' á 8". Flores rosa- das en cimas terminales, corirabiformes ó arracimadas, peduncula- das y de cáliz monosépalo tubuloso 5-fido ó 5-dentado persistente, algo ventrudo; corola mfundibuliforme ó hipocrateriforme, plegada en el botón, y de limbo doblemente duplicativo; partida en 5 divi- siones poco profundas, iguales, ba^tante anchas y agudas, de tubo claviforme y no estrechado; estambres algo salientes é inclinados de un solo lado, insertos hasta el medio del tubo de la corola y por debajo de la garganta, cuyos filamentos son peludos interiormente. Ovario bilocular, poliovulado, sentado en un disco amarillo, ovoideo y de cuyo ápice sale un estilo filiforme casi tan largo como los es- tambres y terminado por un estigma cabezudo y bílobo á la par. Cápsula ovoidea cuvas muchísira-is semillas están en una placenta central ; nicotiana, F. 67, T. II. S.-T. II, G. VIL 600. Plantas herbáceas anuales, sub-fruticosas y hasta arbustos, de tallo simple mas ó menos ramoso, cilindrico, tetrágono ó 4-alado, VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPETALOS. 293 con hojas simples, opuestas ó verticiladas j cortamente pecioladas, con las nervadi*ras arqueadas. Flores ordinariamente en cimas ter- minales, de cáliz 5-partido ó 5-fido, con las divisiones imbricativas y no aquiladas, derechas y con los bordes mas ó menos membrano- sos; corola infundibuliforme ó hipocrateriforme, marcetcente, de tubo contraido y de limbo abierto, con frecuencia oblicuo, otras ve- ces decidua, cuyo tubo se va ensanchando gradualmente hasta des- aparecer en el limbo; estambres insertos en la parte inferior del tubo de la corola, y frecuentemente desiguales, de anteras por fin recorvadas, con el conectivo de ordinario ensanchado; estilo persis- tente terminado por un estigma bilamelado: lisianthus, F. 64, T. II, S.-T. I, G. I. ^ 601. Plantas herbáceas anuales ó arbustos, de tallos ramosos, con los ramos dicótomos, altos de 3' á 6' y 10', lampiñas ó pubescentes y que exhalan un olor viroso bastante desagradable; hojas simples, alternas, pecioladas, aovadas ó aovado-oblongas, enteras con algu- nos dientes, ondeadas, ondeado-dentadas, puntiagudas, algunas ve- ces meilizas, con una mas pequeña. Flores solitarias saliendo de las dicotomías y estra-axilares, pendunculadas, blancas ó moraditas y grandes, de cáliz monosépalo tubulado, 5-deniado ó hendido, con 5 ángulos, ventrudo, mitad mas corto que la corola, y por fin circon- ciso ^or la base que persi&te, sigue vejetando y á veces se vuelve bastante grande; corola infundibuliforme, plegada en el botón y de limbo dos veces plegado, 5-dentadoy abierto y cortamente 10-den- tado, larga de.de 3"-4"-5"-6"-7"-10" y ha.^ta 12"; estambres inser- tos en el tubo de la corola, inclusos, y sin embargo de filamentos largos de 1" á4'' y mas, de anteras coherentes y lineares ó distin- tas, oblongas ú oblongo-lineares. Ovario ovoideo de 4 celdas incom- pletas, y 2 solamente hacia el vértice, poliovulado con la placenta central; del ápice sale un estilo filiforme muy largo, terminándose por un estigma bilamelado. Cápsula ordinariamente erizada ó espi- nosa y raras veces inerme , bilocular superiormente y 4-locular interiormente, abriéndose por 4 ventallas, con muchas semillas pe- queñas, prietas, rugosas y un poco arriñonadas, de embrión encor- vado : datura, F. 6*7, T. II, S.-T. II, G. VI. 602. Fruto drupáceo, 603 — Fruto abayado, 612. 603. Vejetales lechosos, 609. — Vejetales nunca lechosos, 604. 604. Estilo simple, cuyo estigma entero ó bílobo está sostenido por un anillo, 605. — Entilo bífido una ó dos veces, 606. 605. Arbustos y rarísimas veces plantas herbáceas, pero sí con frecuencia vejetales fruticosos y ¡sub-fruticosos, de tallos muy ramo- sos, bastantes veces sarmentosos, lampiños, pubescentes, peludos y pelierizados, con hojas simples alternas, mas ó menos pecioladas, enteras, de forma bastante variada , elípticas, elíptico-oblongas, elíptico-lanceoladas, espatuladas, oblongas, oblongo-aovadas, oblon- go-lineares, lanceoladas, lanceolado-aguzadas , aovadas, aovado- lanceoladas, obtusas, obtusitas, aguzadas ó puntiagudas; su tamaño es tan variado como su forma : las hay en efecto de l"-2"-3"-4"- 5"-6" hasta 12'' y 15" de largo, lampiñas, alampiñadas, pubescen- tes, velludas, pelierizadas, etc. Flores unilaterales en espigas del- 294 MÉTODO DICOTOMICO. gadas escorpioídeas, cuyo conjunto forma especies de umbelas ó panojas terminales, y de cáliz monosépalo 5 ó á veces 4-partido ; corola hipocrateriforme, mas larga que el cáliz, de tubo bastante largo y cilindrico, pubescente, pnbescentito, alampiñado ó velludo, cuya base está algo crecida y de limbo 5-fido, con los lóbulos cortos y mas ó menos iguales; estambres inclusos ó cuyas puntas de las anteras Cbtán algo esertas, insertos en el tubo de la corola. Drupa con 2 liuesecitos biloculares ó 4 huesecitos iiniloculares, monosper- mos, embrión recto ó encorvado : toíirnefortia, F. 66, T. II, G. II. 606. E.-tilo dos veces bífido, 607. — Estilo solamente bífido, 608. 607. Arboles ó arbustos, raras veces frútices, alampiñados, pu- bescentes, velludos, aterciopelados y siempre bastante ásperos, de hojas simples, alternas, pecioladas, de forma y tamaño muy varia- dos, oblongas, oblongo-lanceoladas, elípticas, elíptico-oblongas, aovadas, aovado-oblongas , aovado-lanceoladas, oval-redondeadi- tas, elíptico-redondeadas, enteras, sub-enteras, ondeadas, ondeado- dentadas, aguzadas, puntiagudas, obtusas y obtusitas, de base aco- razonada, redondeada, aguzada etc., alampiñadas , pubescentes, velludas, pelierizadas, aterciopeladas y mas ó menos ásperas, lar- gas de 3"-4"-5' -6'' hasta 8"-12" y 18". Flores de ordinario peque- ñas y poco vistosas, en cimas abiertas ó contraidas, á veces políga- mas ó en panojas corimbosas, otras veces en glomérulos, espidas ó cabezas, de cáliz monosépalo tubuloso y con frecuencia cerraoo en el botón, 10, 12-costilludo,5ó3-dentado ó no costilludo y reventán- dose por el ápice cerrado ó regularmente 5 ó 4-dentado; corola in- fundibuliforme ó hipocraterifí.rme, marcescente ó decidua, de gar- ganta desnuda ó peluda, con el limbo de 5 ó 4 segmentos casi iguales ; estambres muy cortos é insertos en la garganta de la coro- la; ovario oval de 4 á 1 celdillas, uniovuladas, de cuyo ápice sale el estilo terminado por 4 estigmas cabezudos; drupa blanca ó á veces cerasiforme, con un huefco asurcado, 4, 1-locülar monospermo: cor di a, F. 66, T. I. 608. Arbustos ó árboles bajitos muy ramosos, lampiños, alampi- ñados ó aterciopelado-pubescentes, pelierizadítos, de hojas simples, alternas, mas ó menos ásperas, ob-aovado-oblongas, oblongas ú ob- aovado-redondeaditas, elípticas, lanceolado-oblongas, ovales, obtu- sas, obtusitas ó puntiagudas y de base aguzada ó redonda, largas de 2"-3"-4''-5", enteras y mas ó menos pecioladas. Flores de ordinario en corimbos cimosos y blancas, de cáliz cerrado en el botón, 5, 2- valve, cuyos dientes ó lóbulos son valvares ; corola hipocraterifor- me ; estambres insertos por debajo de la garganta de la corola ó en la parte mas inferior de su tubo y esertos. Drupa globosa ú ovoidea con 4 huesecitos que se separan mas tarde, ó fruto drupáceo seco con 4 cocos que se separan de un carpóforo bipartido y filiforme : Uurreria, F.66, T. II, G. I. 609. Drupa verde-amarillenta deprimida^ algo trígona, ensan- chada transversalmente, de hueso bilocular, incompletamente de- hiscente y con 4 ó 2 semillas; corola bastante grande de un primo- roso color amarillo azufrado, 610. — Drupa redonda cerasiíorme, moradusca; corola pequeña amarillenta, 611. VEJETALES HERMAFEODITOS MONOPETALOS. 295 610. Arbusto ó arbolito bajito que se eleva á 10'-20' de altura, bastante ramoso ó coposo superiormente, con hojas simples, alter- nas ó esparcidas, sub-sentadas, lampiñas, coriáceas, lanceolado- lineares, aguzadas por ambos estremos, puntiagudas, de un hermoso color verde subido j de cara superior lustrosa, largas de 3" á 6". Flores en racimos paucífloros v terminales, de cáliz monosépalo pe- queño, con 5 divisiones muj profundas, lanceolado-aguzadas, casi mitad de la lonjitud de la parte cilindrica del tubo de la corola que es 3 veces mas corto que su parte ensanchada ; corola larga de 3", grande, infundibulit'orme, estrechada hacia la base, de tubo clavi- forme y cuyo orificio lleva 5 dientecitos escamosos, de garganta pentágona, con el limbo con 5 lóbulos oblicuos, de preñoracion tor- cida; estambres inclusos é insertos en la parte mediana del tubo de la corola, de anteras con conectivo mucronado ; ovario trígono, bi- locular, de cuyo ápice sale un estilo simple bastante largo, termi- nándose por un estigma espeso claviforme y con dos puntitas: the- vetia, F. 63, T. II, S.-T. III. 611. Arbusto saliendo de una especie de cepa bastante gruesa: la hemos visto hasta de 6" de diámetro transversal, perpendicular, mas ó menos cilindrica, y cuya parte inferior echa raices bastante gruesas y largas, de madera ni blandita ni dura tampoco, bastante livi^a y de un color blanco lijeramente teñido de amarillento; la corteza que la cubre es poco espesa, de un color que á primera vista parece gris ceniciento, pero que después de limpiada con agua y un cepillo aparece color de cacao, con muchas estrias verticales. Los vastagos, mas ó menos numerosos, que salen de ella son muy dere- chos y rectos, poco ramosos, en forma de varita y se elevan hasta 8*^ ó 12' de altura y alcanzan el diámetro de 2" á 2 l\^" , con rarnos opuestos también y muy rectos y derechos que salen de la axila de las hojas, de corteza lampiña, pardusco-achocolatada, mas ó menos pálida, con muchos puntitos ó manchitas blancas. Hojas simples, enteras, opuestas, subsesiles ó muy cortamente pecioladas, óvalo- lanceoladas, aguzadas por ambos estremos, mucronado-obtusas, algo orladas por la circunferencia, lampiñas por ambas caras, cuya superiores verde casi manzana y lustrosa, mientras la inferior es mas pálida, de costilla muy pronunciada, con las nervaduras bas- tante preeminentes y en número de 11 á 13 de cada lado de la cos- tilla, opuestas inferiormente y alternas superiormente en la misma hoja ó todas alternas, largas de 5" algo mas ó menos y anchas de 2- 2 ll2". Flores ni grandes ni pequeñas tampoco, pero regulares, en grupos axilares, largamente pedunculadas, cuyo pedúnculo filiforme, unifloro, largo de unas 12'" á 15'", verde, lampiño, un poco crecido por el ápice, lleva un cáliz monosépalo, 5-partido, cuyas divisiones membranosas por los bordes, triangulares y puntiagudas, son largas como de Y" esca>ay derechas; corola hipocrateriforme mucho mas grande y larga que el cáliz, amarillento-verdosa, cuyo tubo largo como de unas 6'", tiene la base ventrudita y algo pentágona, por encima de la cual sigue mas estrecho y pentágono y se encuentra otra vez al nivel de la garganta, de la cual sale el limbo partido en 5 lacinias bastante largas, abiertas y después dobladas hacia abajo, de manera 296 MÉTODO DICOTÓMICO. que su punta alcanza el cáliz, un poco ondulosas, esteriormente lam- piñas, así como el tubo, mientras su cara interna, que se ha vuelto superior al abrirse la corola, está cubierta de pelo blanco como algo- donoso j bastante largo: el interior del tubo es solamente pubet-cen- te; estambres de anteras conniventes, sentadas en la garganta de la corola j formando un cono amarillo-pardusco largo como de V" es- casa; son pubescentitas esteriormente é inclusas. Ovario casi redon- do y que sin embargo parece un poco lobado, por cau!?a de un surco vertical muj poco pronunciado, sentado sobre un disco hipojínico, de cuyo ápice sale un estilo blanco, filiforme, bastante largo, termi- nado por un estigma glanduloso, grueso y pegado con la paite inte- rior é inferior de las anteras : gnaclmwiaca, F. 63, T. II. 612. Vejetales lechosos, 628. — Vejetales nunca lechosos, 613. 613. Baja grande con semillas abroqueladas, discoideas, albumi- nosas y con los cotiledones foliáceos, 614. — Bayas mas ó menos grandes ó pequeñas, pero cuyas sencillas no están nunca abroquela- das ni albuminosas, y de embrión con los cotiledones foliáceos, 615. 614. Arbustos abejucados provistos de zarcillos leñosos ó sin ellos y entonces se agarran por el véitice de sus ramos nuevos que se enroscan sobre los vejetales vecinos, pelierizados ó pubescentes, con hojas simples, alternas, de ordinario triplinervias, aovadas ó elíp- tico oblongas ú oval-oblongas, coriáceas, aguzadas o con una punta obtusa con 3 ó 5 nervaduras pronunciadas, lustrosas y lampiñas ó pelierizadas. Flores pequeñas axilares ó en cimas corimbi formes, de cáliz monosépalo 5, 4-partido ; corola hipocrateriforme ó enro- dada, con 5 lóbulos entendidos, de prefloracion valvar, pubescente; estambres inclusos é insertos en la garganta lampiña ó pubescente de la corola, de anteras subsesiles y cuyo conectivo no está prolon- gado. Ovario bilocular, redondo, de cuyo ápice sale un estilo filifor- me, con un estigma espeso algo cabezudo: stryclinos, F. 61, Or. III. 615. Baya coriácea; corola con 5 apéndices situados en la gar- ganta y opuestos á las divisiones del cáliz, 616. — Baya nunca co- riácea; corola de garganta sin apéndice alguno, 617. 616. Arboles bajitos ó arbustos y hasta frútices, muy ramosos y poco altos, de hojas simples, esparcidas, opuestas ó verticiladas y sub-verticiladas, coriáceas, entejérrimas, engrosadas por la márjen, sub-revuelta, á veces mucronaditas, obtusas, alguna vez espinosas, con frecuencia provistas de puntitos diminutos, largas de 4"-l 1[2" y anchas de *l li2'" á 6''', lampiñas, acuñado- espatuladas ú obova- les, lanceolado oblongas, obtusas ó mucronadas, subsesiles. Flores blancas ó anaranjadas, en racimos, en umbelas terminales ó solita- rias, de cáliz monosépalo 5-partido, de lóbulos obtusos, algo pesta- ñosos por la máijen é imbricados ; corola 5-fida, enrodado-hipocra- teriforme o sub-campanuda , lampiña, con los lóbulos obtusos, abiertos y de estivacion imbricada; estambres insertos en la pai'te mas inferior del tubo de la corola, libres y algo mas largos que él, cuyos filamentos de base algo dilatada y aplanada, y subulados, lle- van anteras biloculares, anchas y mas cortas que ellos, elipsoídeas y tríquetras, y sin embargo esertas, cuyas celdillas adheridas y Ion- VE JÉTALES HEEM AFRODITOS MOKOPETALCS. 297 jitudinalmente dehiscentes están reunidas por un conectivo grueso, de ápice troncado, que se prolonga por encima de ellas, entrorsas y abriéndose por medio de grietas. Ovario ovoideo unilocular, con muchos óvulos insertos en una placenta central, ovoideos y ascen- dentes ; del ápice sale un entilo cilindrico con la base cónica y ter- minándose por un estigma cabezudo sub-5-lobo, cuyos lóbulos son opuestos á las divisiones calizinales. Fruto globoso ú ovoideo, con 10 ó solamente 3 semillas anidadas en la sustancia gelatiriosa de la placenta y casi cubiertas por ella, ovoideas, algo comprimidas late- ralmente, cuyo ombligo oval y ventral se estiende desde la base hasta la parte mediana: jacqvÍ7iia. F. 80, T. II. 617. Cáliz avejigado mas ó menos desarrollado, y que encierra enteramente la baya, 618. — Cáliz nunca jamás vejigoso, baya no envuelta enteramente por el cáliz, 619. 618. Plantas herbáceas anuales ó vivaces, velludas, pubescentes ó alampiñadas, muy ramosas y de ramos dicótomos, altas de Y á 2', con hojas simples, alternas ó mellizas, pecioladas, enteras, sinuo- sas, sinuoso-dentadas, sub-enteras, acorazonadas, aovadas, deltoí- deo-aovadas, aovado-oblongas, puntiagudas úobtusitas. Flores soli- tarias en la dicotomia de los ramos ó laterales, de cáliz monosépalo 5-fido, avejigado y con 5 ángulos mas ó menos pronunciados ; corola cortamente campanuda, de limbo plegado en el botón, amarillenta, con puntitos purpúreos por dentio ó pálida y sin ellos, larga de 3"'- 4'"-6"'-8'"; estambres inclusos, insertos en la parte inferior de la corola, de anteras de ordinario moradas y á veces amarillas, ergui- das y lonjitudinalmente dehiscentes. Ovario casi esférico, bilocular, poliovulado, de cuyo ápice sale un estilo corto terminado por un estigma muy pequeño y cabezudo. Baya esférica, ceratiforme, de ordinario amarillenta, bilocular, con muchas semillas arriñonadas, situadas en dos placentas, insertas en los tabiques : pkysalis, F. 67, T. II, S.-T.I, G. 11. 619. Baya muy poco carnuda, casi capsuliforme y á veces muy grande, 2 ó raras veces 3-locular, cuya placenta central lleva las semillas que se hallan como en una celdilla vacía y sin pulpa alguna, de sabor muy picante y hasta quemante, 620. — Baya mas ó menos gruesa y siempre llena de pulpa, mas ó menos abundante, sabor nunca picante, 621. 620. Arbustos ó plantas herbáceas anuales, muy ramosos, lampi- ños ó pubescentes, que se elevan á 2 l[2'-4' y hasta 6' de altura, con hojas simples, alternas y á veces mellizas, en especial hacia el vér- tice de los ramos, pecioladas, aovadas, ovales, sub-enteras, puntia- gudas. Flores solitarias ó fasciculadas, situadas en la bifurcación de los ramos ó laterales, blanquecinas y de cáliz monosépalo, 5-denta- do ó sub-entero; corola enrodada, de limbo plegado y con los 5 ló- bulos vahados; estambres insertos en la garganta de la corola, inclusos, cuyos filamentos muy cortos é iguales llevan anteras con- niventes y dehiscentes por una grieta lonjitudinal. Ovario ovoideo ó redondo, bilocular, poliovulado, de cuvo ápice sale un estilo sim- ple terminado por un estigma cabezudo. Baya seca mas ó menos vo- luminosa, tan pronto muy pequeña y larga solamente de 3'" ó 4'" y 298 MÉTODO DICOTÓMICO. 6'", como del tamaño del puño y larga de 3" á 4", roja ó amarilla j lustroí^a, con semillas amarillentas, comprimidas j casi discoideas: capsícum, F. 67, T. II, S.-T. IV, G. III. 62i. Anteras conniventes y abriéndose por poros situados en el ápice, 622. — Anteras abriéndose longitudinalmente por una grieta, 623. 622. Plantas herbáceas, arbustos, vejetales fruticosos y sub-fru- ticosos, á veces sarmentosos ó abejucados, lampiños, alampiñados, pubescentes, velludos, aterciopelados, aguijonosos ó inermes, muy ramosos y con hojas simples, alternas, raras veces como compuestas, enteras, mas ó menos lobadas, sinuosas, angulosas, de forma y ta- maño muy variados, pecioladas, algunas veces aguijonosas, pero mas comunmente inermes. Flores en racimos ó espigas terminales, otras veces en grupos paucífíoros laterales, de cáliz monoséualo 5- partido, algo campanudo, persistente, pubescente, peludo ó aguijo- noso ; corola enrodada, de limbo 5 ó mas rara vez 9, 4-fido, plegada por la base ó 5, 9, 4-partida, con sus divisiones valvadas ó indupli- cativas ; estambres 5 de ordinario y algunas veces 9 ó 4, insertos en la garganta de la corola, de filamentos cortos, con las anteras gran- des, conniventes, raras veces coherentes, y sin conectivo preemi- nente, por fin abriéndose algunas veces longitudinalmente. Ovaiio mas ó menos globoso ú oval, 2 ó 4-locular, poliovulado, de cuyo ápice sale un estilo simple de lo largo de los estambres, terminado por un estigma cabezudo que se presenta por el ápice de la pirámide amarilla formada por las anteras. Baya mas ó menos gruesa, de for- ma y de color variados bi ó caadrilocular, polisperma y cuya base está envuelta por el cáliz persistente : solanum, F. 67, T. II, S.-T. III, G. I. 623. Anteras coherentes; hojas pinatisectas, 624. — Anteras nunca jamás coherentes ; hojas siempre enteras, 625. 624. Plantas herbáceas y anuales velludo-glandulosas, de tallos largos, muy ramosiiS, tendidos por el suelo ó algo trepadores, con hojas alternas pecioladas, de divisiones alternativamente pequeñas y grandes y pareciendo hojas compuestas, viscosas y exhalando un olor viroso bastante fuerte. Flores en cimas laterales largamente pedunculadas, amarillas y de cáliz monosépalo, 5-partido y á veces hasta 9-partido, mitad mas corto que la corola, cuyos segmentos lineares y puntiagudos son velludos como él ; corola enrodada, de limbo plegado, con los lóbulos valvados y en igual número que las diviteiones calizinales; estambres caj^o número corresponde al de los lóbulos de las cubiertas florales, insertos en la garganta de la coro- la, de filamentos cortos, anteras abriéndose á lo largo de su lado in- terior. Ovario globoso ú algo deprimido, como discoideo y mas ó menos asurcado, de cuyo ápice sale un estilo simple que se termina por un estigma cabezudo que aparece en el vértice del cono forma- do por las anteras, algo bílobo y glanduloso. Baya colorada, lus- trosa y lampiña, con 2 ó 3 celdas conteniendo muchas semillas : lycopersicum, F. 67, T. II, S.-T. III, G. IV. 625. Corola siempre largamente tubulada y con frecuencia hipo- crateriforme ; filamentos bastantes veces con un diente, 626. — Co- VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPKTALOS. 299 rola siempre campanuda; filamentos siempre sin clientes; baya pisi- forme anjarilla, 621. 626. Arbustos lampiños ó pubescentitos mas ó menos ramosos j CUTOS ramos largos y delgados son en forma de varita, altos de 3', 6' y 8', con hojas simples, alternas, lustroso-lampiñas, aovado-lán- ceolada^, elíptico-oblongas, oblongas, elípticas, oblongo-lanceola- das, aovado- oblongas, con venas delicadas ó con las nervaduras preeminentes interiormente y por fin visibles por la cara superior, obtusitas, de base mas ó menos obtusa, alampiñadas, cartáceo- membranosas ó coriáceas, cortamente pecioladas, enteras. Flores en cimas estra-axilares ó en especie de panojas terminales no gran- des, amarillentas, de ordinario muy olorosas, subsesiles ó larga- mente pediceladas, y de cáliz monosépalo .pequeño, campanudo y algo tubulado, muy corto y 5-dentado; corola infundibulifor- me ó hipocrateriforme, de tubo larguísimo, claviforme, del^^^ado ó filiforme y cilindrico, cuyo lim.bo corto, induplitativo y llano es abierto y con 5 divisiones agudas, iguales y escotadas, pu- bescente por las márjenes; estambres de filamentos muy cortos é insertos en la 'garganta de la corola ó mas largos que las anteras é insertos entonces por encima ó en el medio del tubo de laceróla, ordinariamente en número de 5 y á veces de 7 ó de 4, de ordinario inclusos, de filamentos lampiños ó pelados por la base, alguna vez provista de un diente. Ovario aovado y pequeño, de cuyo ápice sale un estilo simple, largo, cilindrico, un poco en- grosado hacia el ápice que lleva un estigma cabezudo, algo bíiobo y glanduloso. Baya ovoidea, oblonga, obovoídea ó sub-globosa, pe- queña, azul ó prieta, bilocular, pohsperma y cuyas semillas redon- deadas tienen el embrión recto: cestnim, F. 61, T. II, S.-T. IX, G. VIL 627. Arbusto ó arbolito muy ramoso y que se eleva de 8' hasta 15' y aun 25', de tallo ó tronco cubierto de una corteza cenicienta, muy agrietada y un poco corchosa, con ramos muy largos, en varita y estendidos; hojas simples, alternas, enteras, aveces fasciculadas, pubescentitas cuando tiernas, pecioladas, elípticas, elíptico-oblon- gas, aguzadas por ambos estremos, puntiagudas y de base algo de- currente en el peciolo, largo como del l\2" á 2", de cara superior Yerde oscuro, algo lustrosa y lampiña, con líneas mas pálidas seña- lando la costilla y las nervaduras que están muy preeminentes por la cara inferior; largas de 12"-8"-6"-4" y 2" y anchas de 5"-4"-3"- 1 I|2". Flores no muy pequeñas ni grandes tampoco , pedunculadas y saliendo por grupos de 10 á 20, de especies de tubérculos que se hallan á lo largo de los ramos del año anterior, al lado de 2 á 3 ho- jas pequeñas que no se desarrollan sino después de la fecundación y alcanzan entonces su tamaño regular; pedúnculo delgado, largo de como 6'", de ápice un poco mas grueso, pendiente y unifloro ; cá- liz campanudo, 5 ó 4-festoneado, blanquecino, largo de 1 I[2"'-2'" y persistente ; corola campanuda blanco-verdusca, gradualmente dila- tada hacia la base, 4 ó 5 veces tan larga como el cáliz, con 5, 4 ló- bulos valvares }' lijeramente induplicativos, obtusos, recorvados, con dos manchitas verdes, larga de 5'" y pubescente. Estambres iu- 300 MÉTODO DICOTÓMICO. serios en la parte mas inferior del tnbo de la corola, alternos con sus divisiones, esertos y por fin ca^i dos veces tan largos como ella, con anteras derechas, gruesas, ovales, escotadas por la base, por donde están pegadas en los filamentos, un poco inclinadas hacia el pistilo y abriéndose lonjitudinaimente. Ovario ovoideo, amarillento por la base, y después blanquecino, bilocular, poliovulado, con una depretion en el ápice, de donde sale un estilo mas largo que los es- tambres, terminado por un estigma verde, glanduloso, cabezudo y trílobo; el estilo está doblado en la prefloracion y después se ende- reza al abrirse la flor. Baya pisi forme amarilla, bilocular y polisper- ma: acnis¿us,Y.Ql,T. II. S.-T. IV, G. V. 628. Corola sin estaminodios ó estambres estériles y abortados, que se han vuelto apéndices; anteras lateralmente dehiscentes; hojas de cara inferior color de oro, 629. — Corola siempre con esta- minodios ó apéndices; hojas de cara inferior nunca dorado-serícea, 630. 629. Arboles frondosos, altos de 35' á 45' ó arbustos de 10' á 15', de hojas simples, enteras, alternas, pecioladas, coriáceas, ovales, oblongas, lauceolado-oblongas ó elíptico- oblongas, con una punta obtusita ó mucronadas, con las nervaduras casi perpendiculares ú oblicuas en la costilla, de cara superior lampiña, verde oscuro y lustrosa, mientras la inferior es dorado-sedosa y mas rara vez pla- teado-sedosa, largas de 5"-4"-3" y anchas de 2"-l |l[2"-8'". Flores pequeñas pedurjculadas, en grupos axilares, situadas en la sumidad de las ramitas y de cáliz monosépalo 5, 6-partido, campanudo, con los segmentos obtusos, casi iguales y escariosos ó membranosos por los bordes; corola 5, 7-lobulada, campanuda, cuyas divisiones son iguales y estendidas; estambres inclusos insertos en la garganta de la corola y altei-nos con sus divisiones. Ovario esférico 5, 10-locu- lar, con tantos óvulos ascendentes : del ápice sale un estilo corto terminado por un estigma 5-fido. Baya globosa 10, 8-locular, del tamaño de una manzana, verdusca, rosado-purpúrea ó azul, otras veces mucho mas pequeña, aceitunifornje y larga de 8'"-6"', prieto- azulada ó negra, con semillas solitarias en cada celda, de casco duro, lustroso, prieto, con el ombligo blanco y lateral, muy largo, com- primidas y conteniendo un endospermo carnudo : clirysoyliyllum^ F. 84, G. í. 630. Apéndices de la corola ó estaminodios simples y situados en- tre sus lóbulos, estambres fértiles en número igual á las divisiones calizinales, 631. — Apéndices de la corola dispuestos por pares, si- tuados entre sus lóbulos, y además hay algunos otros mas interiores y alternos con los estambres, 637. 631. Cáliz siempre con 5 segmentos imbricados, de los cuales 2 son interiores; corola semi-quinquéíida ó casi 5-partida, de estiva- cion imbr-icada, con los 5 apéndices alternando con sus lóbulos y con frecuencia partidos á manera de dientes; endospermo copioso, 636. — Cáliz cuyo número de lóbulos no e& fijo, pero varia bastante, 632. ^ ■• ^ 632. Cáliz 4, 6 y hasta 12-partido, de segmentos imbricados, cu- yos dos Cfcteriores son algo mayores y abrazan á los demás; corola VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPÉTALOS. 301 campanuda con 4, 5, 6 lóbulos profundos; endospermo nulo, 633. — Cáliz formado de 5, 6 sépalos imbricados en la estivacion ; corola tubuloso-campanuda, 5, 6 lobada, cuyos segmentos están partidos hasta el medio j aun mas allá; endospermo carnoso, 635. , 633. Cáliz con 5 sépalos imbricativos; ovario 5-locular con óvu- los ascendentes, 641. — Cáliz 4 ó plurisépalo ó partido é imbricativo; ovario 10, 2-locular con los óvulos pendientes, 634. 634. Arboles grandes y coposos, con las ramitas sedoso ó velludo- herrumbrosas ó alampiñadas, con hojas simples, alternas, peciola- das, cartAceas, obaovado-oblongas ú obaovadas, otras veces espatu- ladas, mucronadas úobtusitas, con las venas distantes y dispuestas á manera de costilla, delicadamente reticuladas, lampiñas por am- bas caras ó lampiñas superiormente, mientras la cara inferior es alampiñada. Flores fasciculadas ó sub-solitarias, pediceladas, axila- res ó laterales en las ramitas, cuyas hojas .ya se han desprendido, de cáliz monosépalo con 4, algunas veces 6 y hasta 12 segmentos* corola tubulosa, 6, 4 8-lobada, á veces cilindrácea, y con tantos apéndices inssertos en su tubo cuantos lóbulos tiene; tantos estam- bres hay cuantos segmentos en laceróla, á los cuales son opuestos y alternos pues con los apéndices, cuyas anteras oblon^i^as ú ovoideas son acorazonadas por la base, mientras que tienen el ápice agudo ú obtusito; e;strorsas dehiscentes esterior ó lateralmente. Ovario peli- erizado mas ó menos ovoideo, con 2, 6, 10 celdas opuestas á los ló- bulos calizinales, con óvulos solitarios en cada una de ellas, oblongos y colgantes de su ángulo interno; del ápice sale un estilo simple, lampiño y que se termina por un estigma obtuso, deprimido ó dis- coideo, lobulado ó tuberculado. Baya carnuda mas ó menos gruesa, globosa ú ovoídeo-oblonga, largado 6" y ancha de 3", con una sola semilla fusiforme, de casco duro, castaño-claro, larga de 2 1[2" v con el hilo blanco muy grande y ventral, y mucho mas pequeña. con 5 á 8 semillas : lúcuma, F. 84, G. III. 635. Arboles muy ramosos y bastante gruesos, que se elevan has- ta 40' de altura y mas, de ramitas, pedicelos y peciolos lijeramente sedosos ó herrumbroso-pubescentes, de hojas simples, alternas, co- riáceas, enteras, pecioladas, de ordinario aproximadas has'a la su- midad de las ramitas, oblongas, elípticas o lanceolado oblongas, elípticas, puntiagudas por el vértice solamente ó por arabos estre- mos; enteramente lampiñas ó con la cara inferior alampiñada, lus- trosas superiormente, largas de 6"-8" 3"- 4" y anchas de 3"-4". Flores en grupos axilares en la sumidad de las ramitas peduncula- das y de cáliz con 6, 5 sépalos ó 6, 5 partido, con las divisiones im- bricativas, ovales ó aovadas, obtusas, de las cuales las 3 interiores son á veces coloradas, sedosas ó herrumbroso-pubescentes; corola campanuda 6, 5-loba; estambres inclusos, de filamentos cortísimos é insertos en el interior del tubo de la corola, con anteras ovoideas ó deltoídeas, otras veces attechado-lanceoladas y mas cort :s que los apéndices de la corola, lateralmente dehiscentes'. Ovario í^-loboso con 12, 4 celdas, con óvulo ascendente: del ápice sale un estilo mas lar- go que la corola, terminándose por un estigma obtuso. Baya bas- tante gruesa, redonda ú oval, cubierta de una concha áspera par- 302 MÉTODO DICOTÓMICO. dusco-amaríllenta, cuyo diámetro es de 3'' á á" ó mucho mas pequeña, según ]as especies; semillas negras, comprimidas, ovales, lisas, lustrosas j de casco muy duro, largas de 8'" á 10'" : sa'pota, F.»84, G. II. 636. Arboles de ordinario bastante grandes, ramosos y coposos, con los ramos las mas veces inermes; tienen hojas simples, alternas y raras veces opuestas, por lo común nervosas, coriáceas, lampiñas ó pubescentes, de forma y tamaño poco variados, mas ó menos oblongas, ovales ó elípticas, aovado-oblongas, largas de 4"-2"-8''', raramente fasciculadas. Flores fasciculadas ó á veces solitarias y axilares, de cáliz monosépalo 5-partido ó con 5 sépalos im1)ricados, y de dos cuales 2 son esteriores; corola enrodada, 5-partida ó 5- fida, con los segmentos mas veces abiertos, de estivacion imbricada, quedándose uno mas esterior ; los apéndices en una sola serie se in- sertan junto á los estambres con que alternan en el tubo de la corola, con cuyos lóbulos alternan también : son petaloídeos inclusos y fre- cuentermente recortados á manera de dientes; anteras de ordinario estrorsas, ovales, obtusas y mediifijas, mas cortas que el filamento y oscilantes. Ovario 5, 2-locular, con los óvulos ascendentes, pelieri- zado, ovoideo y de cuyo ápice sale un estilo simple algo mas largo que él y terminándose en un ápice agudito y por lo menos lobado. Baya de ordinario pequeña y las mas veces cerasiforme, ovoidea ó globosa, cuyas semillas son 3, 1 por causa de aborto, globosas y ra- ras veces ovoideas, lustrosas, con 4 ó 5 crestas obtusas, de ombligo redondo, pequeño y algo deprimido; endospermo espeso y cartila- jinoso, cotiledones grandes, planos y foliáceos : siileroxylon , F. 84, G. IV. 637. Hojuelas del cáliz 6, 8, dispuestas en dos series; apéndices de la corola pareciendo sus segmentos, dobles que ellos ó mas nume- rosos y apareados entre ellos, 638. — Hojuelas calizmales nunca en dos series, 5, 4, 8-imbricativas ; apéndices de la corola no semejan- tes á sus divisiones, dispuestos en dos series, cuya esterior está apa- reada entre ellas, mientras la interior alterna con los filamentos, 639. 638. Arboles no rara vez muy altos, corpulentos y coposos, de hojas simples, alternas, coriáceas, enteras, pulidas, con las venas poco notables, oblongas, obaovado-oblongas, obaovadas, ovales ó aovado-oblongas, retusas ó apiculado-obtusas, concóloras ó discólo- ras, enteramente lampiñas ó de cara inferior alampiñada, pubes- centita, sedoso plateada ó escamosita, largas de 2"-4"-5"-6". Flores con frecuencia fragantes y blancas, axilares, frecuentemente soli- tarias ó mellizas y pediceladas, de cáliz con 6, 8 hojuelas; corola enrodada 6, 8-partida; estambres insertos en el tubo de la corola, de filamentos delgaditos y cortos, alternos con los apéndices inte- riores, de anteras asaetadas mas largas que ellos, estrorsas, bilo- culares y lonjitudinalmente deliiscentes. Ovario pelierizado, mas veces anguloso, de celdillas en número igual á los segmentos calizi- nales con que están opuestas, con un solo huevecillo colgante de su ángulo interno y ascendente: del ápice sale un estilo cilindráceo, lampiño, algo asurcado y terminado por un estigma pequeño. Baya YEJETALES HERMAFRODITOS MONEPÉ TALOS. 303 globosa Ó sub-elipsoídea ó bilocular por causa de aborto, con pocas ó lina sola semilla también por el aborto, derechas, obovoídeas ó elipsoídeas, de casco crustáceo y lustroso; ombligo oval j pequeño; endospermo carnoso ; embrión central erguido , de cotiledones grandes foliáceo-carnosos y con raicilla cilindrica é infera : mimu- sops, F. 84, G. V. 639. Semillas provistas siempre de un endospermo ; cáliz con 5 y aveces 4, 8 hojuelas ó divisiones foliáceas, 640. — Semillas sin en- dospermo ; cáliz con 5 segmentos foliáceos, 641. 640. Arboles altos y ordinariamente corpulentos, con las ramitas lampiñas, alampiñadas ó herrumbroso-sedosas, llevando hojas sim- ples, alternas, enteras, cartáceas, con las venas arqueadas, peciola- das, aovado-oblongas, elíptico-oblongas, lanceoladas, elíptico-lan- ceoladas, obaovadas ú obaovado-lanceoladas, terminadas por una punta mas ó menos retusa ú obtusa, de base bastantes veces agu- zada, no rara vez ondulólas, largas de2"-3"-4"-5". Flores 4-10 dis- puestas en especies de umbelas ó cimas axilares á veces muy fra- gantes, cuyos pedicelos mas largos que ellas son sedosos y herrum- brosos, así como el cáliz que es 5-partido y de estivacion imbricada; corola 5-partida enrodada ó infundibuliforme ; estambres inclusos, opuestos á los lóbulos de la corola, cuyos filamentos se insertan en su tubo, con anteras estrorsas , redondeado-acorazonadas y mas cortas que el filamento, de polen elipsoídeo. Ovario 5, 4-locular ovoideo y con 5 ángulos, lampiño, con óvulos ascendentes, y en cuyo ápice está un estigma sentado y agudito. Baya ovoídeo-globosa, por lo regular pequeña, larga de 6'"-8'" y ancha de 6'", con una ó dos semillas ovoideas ó sub-redondas, lisas, lustrosas, de casco crustá- ceo y con estrias poco mareadas, con el hilo sub-lateral, de embrión erguido y axil con los cotiledones planos: dipJiolis, F. 84, G. IV. 641. Arboles bajitos, de madera durísima y muy fuerte, cuyas ramitas sub-sedosas, alampiñadas, enteramente lampiñas ó sedoso- herrumbrosas, llevan hojas simples, alternas, obaovadas ó redondi- tas, oval-redondeaditas, oval-oblongas, redondeadas por ambos estremos ó solamente por el vértice obtuso ó retuso, enteras, cor- tamente pecioladas, largas de 8'"-l"-2"-3"-4", coriáceas, con las venas costi Hadas y oblicuas. Flores solitarias ó fasciculadas, axila- res, pediceladas, lampiñas ó bozosas; de cáliz 5-partido, con los seg- mentos obtusos, de los cuales dos son esteriores y de estivacion im- bricada; corola 5-fida enrodada ó infundibuliforme, con apéndices angostos acompañando á cada lado de los lóbulos y por consiguiente en número doble de ellos ; estambres petaloídeos, alternos con las divisiones de la corola; ovario 5-loeular, ovoideo, de óvulos ascen- dentes, pelierizado ó pubescente, de cuyo ápice sale un estilo corto filiforme y lampiño, terminado por un estigma agudo. Baya elipsoí- dea ú ovoidea, larga de 1 l|2"-r'-6"', con una semilla lisa, de casco crustáceo, de ombligo basilar y sub-redondo; cotiledones gruesos, ovales y aplicados por la cara, raicilla cortísima : lumelia, F. 84, ¡642. Dos ovarios, 643. — Cuatro ovarios, 668. 643. Fruto drupáceo; vejetales muy lechosos, 644. — Fruto seco y capsular; vejetales mas ó menos lechosos, 645. 304 MÉTODO DiCOTÓMICO. 644. Arbustos ó árboles bajitos, muy ramosos, cuyos ramos son de ordinario dicótomos, de ramitas lampiñas, alampiñadas ó pubes- centes que llevan hojas simples opuestas ó verticiladas por á 3 ó á 4; cortamente pecioladas, cartáceas ó membranosas, elípticas, lan- ceolado-oblongas, elíptico-oblongas, aovado-lanceoladas, puntiagu- das ó aguzadas por el vértice y á veces por ambos estremos, de cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior es alampiñada, lampiña ó pubescentita sobre las nervaduras, con venas delicadas peninervias, enteras y de ordinario desiguales en el mismo verticilo. Plores pequeñas, blancas ó rojizas, en cimas axilares pauci ó plurí- floras, pediceladas, y de cáliz monosépalo 5-fido ó 5-partido, con los segmentos agudos é iguales ; corola hipocrateriforme, de tubo cilin- drico dos ó tres veces mas largo que el cáliz, de limbo con 5 divisio- nes iguales, de prefloracion torcida hacia la izquierda ; estambres inclusos é insertos en la parte superior del tubo corolar. Dos ovarios distintos ó lijeramente coherentes, pauciovulados y envueltos infe- riormente por un disco aorzado ; estigma provisto de un indusio que con frecuencia encierra 2 puntitas. Drupa dídima por ser adheridos los dos carpidlos, semi-ovoídeo-redonditos, escotada, redondeadita, troncada, elipsoídea, retuso-troncada, larga de 3"'-6'" y ancha de 4'"-5'", morada cuando madura : raiiivolfla, F. 63, T. II, S.-T. II, G. IV. 645. Estigma indusiado ; polen no en masas ceráseas ó polinias ; anteras sin apéndice ó membrana por el ápice, 646. — Estigma sin indusio; polen compuesto de polinias ó masas ceráseas ordinaria- mente en número de 10, de las cuales 2 se unen á las anteras veci- nas ó adyacentes por medio de una glandulita común ; anteras ter- minadas por un apéndice ó membrana, 655. 646. Conectivo no presentándose por debajo do las celdillas de las anteras ; semillas de ordinario no penachudas, 647. — Conectivo ensanchado y presentándose por debajo de las celdas de las anteras; semillas ordinariamente provistas de un penacho terminal, 654. 647. Vejetales no ó apenas lechositos, 648. — Vejetales muy le- chosos, 649. 648. Planta casi leñosa ó matita, muy ramosa, derecha, pubes- centita que se eleva á 1 l[2'-2 1[2' de altura, con hojas simples, opuestas, enteras, pecioladas, cartáceas, lustrosas, espatulado- oblongas ú óvalo-lanceoladas, con 2 glándulas frecuentemente si- tuadas por su base y también en la de las lacinias del cáliz, largas de 2"-2 lf2". Flores rosadas ó blanquecinas, bastante grandes y pri- morosas, solitarias ó con mayor frecuencia mellizas y axilares, de cáliz monosépalo 5-partido, con segmentos aguzados ó quizás mejor dientes erguidos, mucho mas corto que el tubo filiforme de la co- rola, que es hipocrateriforme, y pubescente hasta la garganta es- trecha, callosa y con 5 ángulos opuestos á los lóbulos 5-obtusos, de prefloracion torcida, algo mas cortos que el tubo corolar largo de 1"; estambres inclusos, insertos en la parte superior del tubo corolar, de filamentos muy cortos con el ápice dilatado á manera de escama cóncava que lleva una antera iuclinada, oblonga, membranosa, con el ápice torcido y mucho mas larga que el filamento. Dos ovarios. YEJETALES HERMAFRODITOS iMONOPETALOS. 305 erguidos, aproximados, lijeramente adheridos, alternando con las dos glándulas del disco oblongas y algo mas largas que ellos, multi- ovulados; el ápice se prolonga en un estilo terminado por un estig- ma indusiado, glanduloso, cónico, de ápice como pelierizado y cabe- zudo ó algo bílobo. El fruto consiste en dos folículos derechos, poco diverjentes, angostos, comprimido-cilindricos, estriados, con mu- chas semillas oblongas, cilindráceas y troncadas por ambos estre- mos, morenas, tuberculadas, de ombligo asurcado j lateral ; em- brión recto, céntrico y mas corto que el endospermo carnudo, con la raicilla cilindrica: vinca, F. 63, T. IV. 649. Fruto samaroídeo, cuya ala terminal se dilata repentina- mente por la base y reviste el carpidlo, 650. — Fruto folicular, 651. 650. Arboles muy grandes y corpulentos ó arbustos, lampiños, de hojas simples, opuestas, membranosas, pecioladas, enteras, elípti- cas, lanceoladas ú oblongo-lineares, obtusas, á veces escotadas por el ápice ó con una punta, de venas dispuestas á manera de costillas, aproximadas y reunidas por un arco, continuo y justa-marjinal, ó delicadas y dispuestas en redecilla floja, largas de 18'"-12'"-10"' y anchas de 6'"-4'"-2'". Flores en cimas terminales paucífloras y blancas, de cáliz 5-fido muy pequeño, largo solamente de 1"'; corola hipocrateri forme, de tubo sub-cilíndrico, algo crecido por ambos la- dos y pentágono, con el limbo de 5 lóbulos oblicuos, cuya preflora- cion es torcida; estambres insertos en la partesuperior de la porción, lijeramente ensanchada del tubo corolar, cuyas anteras subsesiles y converjentes se terminan por un apéndice cerdoso que es la prolon- gación del conectivo. Dos ovarios, cuyo estilo simple y filiforme se termina por un estigma indusiado y bipartido, con 2 segmentos có- nicos. Semillas obtusas, comprimidas, discoideas, aladas é imbrica- das : cameraria, F. 63, T. IV, S.-T. II, G. 11. 651. Folículos grandes, frecuentemente con pulpa, y cuyas semi- llas son asurcadas y sin alas. Anteras aflechadas y aguzadas, 652. — Folículos largos comprimidos y un poco fusiformes, sin pulpa alguna y cuyas semillas imbricadas son aladas; anteras converjentes no aflechadas, 653. 652. Arboles á veces hasta de 60' de alto, corpulentos y coposos, pero de ordinario arbustos mas ó menos altos, muy ramosos, ordi- nariamente lampiños, de hojas simples, opuestas, pecioladas, ente- ras, oblongas, ovales ú oval-oblongas, obaovado-lanceoladas, elip- tical-oblongas, lanceolado-oblongas , onduiosas ó no, obtusas 6 puntiagudas por ambos estremos, ó terminadas por una punta mas ó menos obtusa, mientras la base va aguzándose hasta confundirse con el peciolo, membranosas, largas de 6"-'7"-5"-8"-4" y anchas de 4"-3"-2"-18'"-9"'. Flores fragantes, blancas ó amarillas y bastante grandes, en cimas terminales, paucí ó plurífloras, mas ó menos pe- dunculadas ó subsesiles, de cáliz monosépalo 5-fido ó 5-partido, y glanduloso interiormente, con los segmentos o val-oblongos y obtu- sos, aovados y obtusitos, aovados ó aovado-lanceolados, de punta obtusa y recorvada ; corola hipocrateriforme, con el tubo ordina- riamente ensanchado en la línea de inserción de los estambres, con los 5 lóbulos del limbo linear oblongos, oljlícuamente espatulados ú TOMO I 20 306 • MÉTODO DICOTÓMICO. obaovaflos, otras veces aoYado-lanceolados, mas largos, tan largos ó mas cortos que el tubo corolar cilindrico; estambres insertos en el medio ó por encima del medio del tubo corolar inclusos ó con el ápice de las anteras eserto. Dos ovarios envueltos por un disco aor- zado, apenas notable ó nulo; del vértice sale un estilo simple termi- nado por un estic-ma sostenido por un indusio anular : tabernmmon- tana\Y. 63, T. iV, S.-T. 11, G. III. 653. Arboles bajitos de 25' de altura ó mas pequeños ó arbustos, de ramos dicótomos gruesos por el ápice obtuso y como carnudo, estendidos, lampiños ó tomentosos; hojas simples, enteras, alter- nas ó esparcidas, con las venas dispuestas á manera de las costillas y reuniéndose en un arco justa-marjinal, cartáceas, enteras, pecio- ladas, oblongas, oblongo-lineares, obaovado-oblongas, espatulado- oblongas, con una punta, ó redondeadas y mucronadas por el ápice, largas de 8"-10''-12"-6"-4:". Flores pediceladas, de ordinario fra- gantes, primorosas, bastante grandes, rosadas, blancas, amarillen- tas, de ordinario saliendo antes que aparezcan las hojas, en cimas terminales pedunculadas, abiertas ó cerradas, pubescentes, alampi- ñadas ó lampiñas, y de cáliz monosép^lo anchamente 5-lobo ó sub- entero, pequeño, campanudo, con los segmentos sub-troncados, re- dondeaditos ó mucronadito-truncados, obaovados; corola grande, períjina, hipocrateriforme ó infundibuliforme, de tubo largo, estre- cho y con frecuencia oblicuo, con el limbo partido en 5 segmentos anchamente ovales, obaovado- oblongos ú obaovados, espatulado- lineares ú oblongo-lineares, casi iguales, tan ó dos veces mas largos que el tubo de la corola ; de prefloracion torcida; Cfetambres inser- tos en la parte mas inferior del tubo de la corola, inclusos y de fila- mentos cortos. Dos ovarios libres ó lijeramente adheridos con el tubo estrecho del cáliz, terminados por un estilo sencillo, corto y terminado por un estigma bipartido. Folículos largos como de 5'' á 6'' y mas, aguzados, ventrudos y conteniendo muchas semillas, comprimidas, oblongas, em.pizarradas, con una ala bastante ancha aguda, dentada ó festoneada : joUimeria, F. 63, T. IV, S.-T. II, G. III. 654. Arbustos ordinariamente abejucados y raras veces plantas herbáceas, de tallos delgados, muy largos, ramosísimos, sarmento- sos ó volubles, lampiños ó pubescentes ; de hojas simples, opuestas, pecioladas, aovado-lanceoladas, aovado-oblongas, oblongo-lanceo- ladas, oblongas, aovadas, lanceoladas, eliptical-oblongas, aovado- redondeaditas, ovales, oval-oblongas, acorazonado-aovadas, con una punta, obtusas ú obtusitas, mucronadas, aguzadas, de base redonda, acorazonada ó algo aguzada, largas de 2"-3"-4''-6"-5"-r'- 1 l|2"-2 \Xl" . Flores bastante grandes ó pequeñas blancas, amarillas ó rosa- das, pediceladas y mellizas, dispuestas en cimas axilares de ordina- rio corimbiformes, las mas veces paucífloras y pedunculadas; de cáliz 5-fido con los segmentos glandulosos aovado-lanceolados, lan- ceolado lineares, aovados, subulados, etc., y sin escamas interiores ó sin glándulas y provistos de escamas interiores qué faltan raras veces, mucho mas cortos que el tubo de la corola hipocrateriforme, desnuda d-. lóbulos oblicuos y de prefloracion torcida por la dere- VEJETALES HEEMAFKODITOS MONOPÉTALOS. 307 cha, con el tubo siib-cilíndrico, infundilniliforme por encima de la base cilindrica, pelierizado entre y por debajo de los estambres, campanudo por encima de la base, pero lampiño; estambres de an- teras conniventes , adheridas al estigma por su parte mediana, oblongas, obtusas, con un muero inclinado y dos cornezuelos, aco- razonadas ó sub-acorazonadas por la base, tiesas, aguzándose desde la base aflechada ó acorazonada j aguzadas por la punta, oblongas, obtusitas y acorazonadas por la base, cornudas, aflechadas con au- rejitas tiesas y obtusitas, aguzadas desde la base y contenidas en la parte mas baja de la porción campanuda de la corola, otras veces provistas de un apéndice terminal y membranoso. Ovario sentado en un disco 5-glanduloso ó 5-lobo y raras veces sub-entero. Folí- culos lineares ó torrulosos, con semillas provistas de un penacho terminal : ecliites, F. 63, T. VIL 655. Yejetales apenas lechosos ó cuya savia es solo un poco tur- bia, 656. — Vejetales muy lechosos, 657. 656. Arbusto ramosísimo, alto de 8' á lo', cuyos ramos largos y lampiños son en forma de varita, derechos, tricótomos y un poco triangulares cuando tiernos, con hojas simples, coriáceas, sub-sen- tadas, verticiladas por á 3, enteras, lanceoladas, aguzadas por los dos estremos, lampiñas, lustrosas, con la costilla muy pronunciada inferiormente blanca, así como las nervaduras delgaditas, paralelas y pinadas, bastante proeminentes y notables en la cara superior por las líneas mas blanquecinas que corresponden á ellas ; primoro- sas flores rosadas, algunas veces blancas, en corimbos terminales pedunculados y pediceladas, de cáliz muy pequeño, monosépalo, campanudo, de 5 divisiones profundas, lineares y derechas; corola grande, infundibuliforme, regular, de limbo partido en 5 segmentos oblicuos, profundos, obtusos y de prefloracion torcida; tubo largo cuyo orificio está adornado de 5 apéndices petaloídeos con el ápice franjeado ; estambres inclusos, distintos, insertos en la parte media del tubo corolar, y cuyas anteras adhieren con el estigma por su parte mediana, son aflechadas y se terminan por un apéndice en forma de penacho. Dos ovarios aplicados uno á otro, derechos, es- triados, larguitos, y de cuyo ápice sale un estilo filiforme, un poco crecido hacia el ápice, que se termina por un estigma cilindrico, truncado y obtuso; la base está acompañada de 5 apéndices muy cortos ó dientes que salen del fundo del cáliz, un poco por afuera de la inserción de la corola y representan el disco. Folículo cilindráceo, bilocular polispermo, derecho y estriado : neriitm, F. 63. 657. Corona de la corola doble, cuva serie esterior es anular ó cortamente ciatiforme, ondulosa ó festoneada, y reuniendo la co- lumna con el tubo de la corola, mientras la interior mas grande es formada de 5 hojuelas situadas por debajo de las anteras, 658. — Corona de la corola sencilla, 659. 658. Plantas herbáceas pubescentes ó alampiñadas, de tallo muy largo voluble y abejucado, muy ramoso, de hojas simples, opuestas, enteras, aovado-oblongas ó lanceoladas, aguzadas ó mucronadas, obtusas por la base glandulífera y pecioladas, largas de l"-2 li2". Flores en umbelas la,terales ó terminales, de pedúnculos mas largos 308 MÉTODO DICOTÓMICO. que las hojas, pubescentes y formadas de algunas flores ; de cáliz 5- partido; corola enrodada 5-partida ó 5-loba, lijeramente torcida, blanca, con los segmentos aovados, obtusitos ú obtusos; corona es- terior anular, sub-entera, mientras la interior, de hojuelas ovales y abroqueladas por la base, escede un poco la columna. Polinias cla- viformes y cilindricas á la par y colgantes, cuyo rabo corto y ascen- dente se inserta en el muero basilar de la glándula deltoídeo-redon- deadita; estigma cónico y sub-entero. Folículos aovado-lanceolados, lampiños, con semillas penachudas: sarcostemma, F. 62, T. IV, S.-T. YIII. 659. Formada de 5 hojuelas, 660. — Anular ó acubileteada ; an- teras transversalmente dehiscentes, 665. 660. Insertas por debajo de los estambres y sin apéndice interior, frecuentemente adheridas por debajo de ellos, 661. — Insertas en la columna, 662. 661. Arbustos sarmentosos, trepadores ó bejucos, lampiños, ó con dos líneas de pelo en las ramitas, de hojas simples, opuestas, pecio- ladas, subsesiles, enteras, lanceolado-oblongas, lanceoladas ó espa- tuladas, aovadas ó anchamente aovado-óblongas, mucronaditas, ob- tusitas, aguzacitas ó algo acorazonadas por la base. Flores en cimas pedunculadas, á veces umbeliformes, pedunculadas ó sub-sentadas y de cáliz con 5 sépalos ó sub-5-partido, con los segmentos orbiculares, ú oval-oblongos y pestañosos; corola cortamente infundibuliforme, con 5 lóbulos ovales dos veces tan largos como el tubo, barbudos por encima de la garganta, ú oval-oblongos, obtusos, pestañudos, inte- riormente lampiños y tres veces mas largos que el tubo: hojuelas de la corona redondeaditas y espesas ó lanceoladas. Polinias oblon- gas ú obovoídeas, y derechas; rabo horizontal é inserto en la base de la glándula. Estigma entero, plano ó convexo-cónico. Folículos lampiños v lisos, con semillas penachudas; marsclenia, F. 62, T. III, S.-T. I, G. I. 662. Verticalmente , dobladas sobre sí y provistas de un espolón ascendente situado en su dorso, 663. — En el vértice de un estipe corto, cuculiformes y provistas de un apéndice encorvado que sale de su concavidad, 664. 663. Arbusto que se eleva á como 10' ó 15' de altura ó á veces se queda una mata, muy ramoso, de corteza blanco-cenicienta, con el epidermis espeso muy agrietado y algo corchoso, las ramitas herbá- ceas todavía son glaucas; hojas simples, opuestas, enteras, sub-sen- tadas, obaovado-oblongas ú obaovado-redondeaditas, muy anchas, acorazonadas por la base, largas de 8'*-6'', lampiñas y glaucas. Fio- res bastante grandes, de como 1" de diámetro, blancas, teñidas por adentro de rojo moradusco, en corimbos axilares largamente pedun- culados; cáliz monosépalo 5-partido ; corola campanuda 5-partida, abierta, con la punta de los segmentos dolDlada un poco hacia fuera, de prefloracion valvar; hojuelas de la corona encorvadas y tan lar- gas como la columna prismática ; polinias comprimidas, espatuladas, diverj entes y colgantes á la par; rabo corvo; horizontal por la base é inserto en la base de una glándula pequeña ; estanibres inclusos y morados; estigma deprimido. Folículos ventrudos, lampiños y lisos. YEJETALES HERMAFRODITOS MONOPÉTALCS. 309 glaucos, conteniendo muchas semillas x^enachudas : calofo^ojñs , F. 62, T. IV, S.-T. YIIL 664. Plantas herbáceas perennes ó matas, de tallo derecho mas ó menos ramoso y que se eleva á 1 l|2'-4' de altura, puhescentito ; hojas simples, opuestas, pecioladas, oblongo-lanceoladas ó lanceola- do-aguzadas, alampiñadas ; flores en umbelas, plurífloras, pedun- ciiladas y saliendo de entre las hojas superiores ó terminales; pedí- celos 5, 12, 3, 4 veces tan largos como las flores sea carmesí ó ver- doso-blancas , de cáliz 5-partido, cuyos segmentos muy pequeños son reflejos, pequeño y campanudo ; corola 5-partida, enrodada con las divisiones reflejas y de prefloracion valvar, elípticas, pun- tiagudas ú obtusitas; columna repentinamente estipitada, apéndices de las cornetas anaranjadas ó blanco-rosaditas, lanceolado-falca- dos, aovado-falcitormes v mas ó menos esertos. Polinias obaovadas, comprimidas, coludas y colgantes. Estigma deprimido. Folículos obion2:o-lanceolados ó lanceolados, lisos y con semillas penachudas : asclcfias, F. 62, T. lY, S.-T. Y. 665. Corona anular reuniendo la columna con la garganta de la corola, 666. — Corona escuteliforme, 15 festoneada é inserta en la columna corta, 667. 666. Matas trepadoras ó bejucos de tallos larguísimos y muy ra- mosos, peludos, densamente pelierizados, pubescentes, alampiñados ó lampiños, con hojas simples, alternas, pecioladas, enteras, ao- vado-oblongas y por la base acorazonadas, lanceolado-elípticas ó elípticas Y puntiagudas por ambos estreñios, puntiagudas, mucro- nadas ó cuspidadas, largas de 4"-2 li2"-l l\2"-8" y anchas de 2 1|2"-1/'. Flores en corimbos paucífloros pedunculados y axilares, ra- ras veces solitarias, pediceladas y de cáliz monosépalo 5-partido, con los segmentos aovado-puntiagudos, lanceolado- aguzados, lan- ceolado-obtufcitos, aovado-oblongos y obtusos, lijeramente peludos, pelierizadítos ó lampiños ; corola enrodada 5-partida ó 5-loba, de prefloracion torcida con los segmentos lanceolado-lineares, aguza- dos, peludos ó alainpiñados, ó con los lóbulos aovado-deltoídeos ó aovado-oblongos, obtusitos, papilosos hacia la punta ó lampiños; diámetro de la corola de 20"'-16'"-18" -12'"-10'"-8'". Polinias obao- vadas, coludas y liorizcntales. Estigma deprimido. Folículos ven- trudos, á veces del tamaño del puño y provistos de tres alas estre- chas lonjitudinales, semillas muchas y penachudas : gonolohiis, F. 62, T. Y, G. I. 667. Mata abejucada ele tallos delgados muy largos y muy ramo- sos superiormente, muy pubescentes, así como las demás partes de la planta; hojas simples, alternas, pecioladas, acorazonado-deltoí- deas, cuspidadas, pelierizaditas superiormente, mientras la cara in- ferior es blanquecino-tomentosa, anchas de 2 l{2"-3". Flores fasci- culadas, axilares y pequeñas, pediceladas y pubescentes, de cáliz monosépalo 5-partido; corola enrodada, 5-partida, ancha de 2Í" lijeramente torcida, pubescente, y con los segmentos aovados y ob- tusos. Polinias ovoídeo-oblongas, paralelas á la glándula oblonga, coludas por su parte media, de cola corta, transversa é inserta en la base de la glándula. Estigma plano, de cuyo centi'o sale una 310 MÉTODO DICOTÓMICO. punta larga, siibuliforme y espesita. Folículos ventricosos, largos de como 3" y erizados de púas carnosas bastante gruesas y largas de V"-l l\2"', con muchas semillas penachudas : ibatia, Y. 62, T. V, G.II. 668. Fruto capsular ó formado de 4 ó 5 cocos ó cajitas, 1 ó 2 es- permas; estambres 5 ó mas, pero de los cuales algunos suelen abor- tar ; Tejetales provistos de glandulitas transparentes conteniendo una esencia. Arboles ó yerbas, 669. — Fruto aqueniforme, formado de 4 acjuenios ó nuecesitas monospermos ; ovarios de base sentada en un disco Lipojínico poco desarrollado; estambres siempre 5 y todos fértiles, 670. 669. Ovarios muy pequeños casi enteramente envueltas por el disco hipójino 12-lobo y muy desarrollado ; estambres cuyo número vario de 7, 5 á 2 reemplazados siempre algunos por estaminodios ; cáliz corto, tubo de la corola seudo-monopétala corto; árboles de hojas trifolioladas, 836. — Los 2 sépalos esteriores del cáliz ocultando laceróla diminuta y cuyo limbo es bilabiado; yerbas altas de 8 á 12", ramosas superiormente, lampiñas ó algo velluditas anuales, con las ramitas rollizas ; hojas alternas, pecioladas y con 3 hojuelas aovado-lanceoladas, entejérrimas, membranáceas, con muchos pun- titos transparentes muy finos. Flores en especie de espiga unilateral melliza en el ápice de un pedúnculo axilar, blanquecinas, de las cua- les las de la segunda serie son mas pequeñas y sentadas : cáliz de 5 sépalos desiguales cuyos dos ó uno exteriores foliáceos y bracteifor- mes son mucho mas largos que la corola que tienen oculta, los dos interiores son mas pequeños y por último el mas interior de todos es diminuto; corola corta tapada por el cáliz, de tubo encorvado y con el limbo 2-labiado, cuyo labio superior es entero y escotado, mien- tras el inferior es 4-lobo. Di¿co escamiforme oblicuo ó unilateral; estambres 5 epipétalos, de los cuales 2 solos son perfectos y 3 sin anteras, de filamentos subulados y barbudos por la parte media; anteras oblongas y sin apéndice. Ovario profundamente 5-partido, con los lóbulos distintos uniloculares y adheridos solamente por medio del entilo cortito, terminado por un estigma cabezudo; óvu- los dos sobrepuestos. Cápsula 1, 5 coca, con los cocos 2 valvares, 1-espermos, de endocarpio suelto elásticamente bílobo, de base membranácea y la semilla distante. Semilla reniforme, con el seno umbilicado; testa tuberculosa; embrión sin endospermo, de cotiledones lisos con orejitas por la base, cuya esterior envuelve la interior; raicilla inñexa monniera, F. 111, T. II. 670. Corola hipocrateriforme, de garganta lampiña ó pubescente; estambres inclusos, 671. — Corola enrodada cuya garganta está adornada con 5 escamas derechas ; estambres insertos en la gar- ganta en donde forman un cono saliente y derecho, 672. 671. Plantas herbáceas anuales, matas y raras veces arbustillos, peludos, pelierizados, sedoso-blanquecinos, pinchudos y rara vez lampiños, de 1' á 5' de alto, de tallos derechos, desparramados y tendidos, muy ramosos, y con hojas simples, alternas, mas ó menos pecioladas, subsesiles ó sésiles, aovadas ó sub-acorazonadas, aovado- lanceoladas, oval-oblongas, lanceoladas, lanceolado-aguzadas ó li- VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPÉTALOS. 311 neares,.elípiico-obloiigas, enteras, fe>stoneado-ondulosas ó de már- jen revuelta, con una punta úobtuíías. Flores unilaterales en espigas eseorpioídeas terminales, ó solitarias; de cáliz 5-partido, y raras veces 5 'dentado algo tubulado ; corola liipocrateri forme, plegada, con 5 segmentos cortos, á veces separados por un dientecito, estre- chada al nivel de la garganta lampiña, ó de tubo abierto, á veces de garganta pubescente, mucho mas larga que el cáliz : estambres in- clusos de anteras distintas ó á veces coherentes por su punta pubes- centita, insertos en el medio ó por debajo del tubo de la corola. Estilo simple terminal ó nulo, sostenido por un anillo abroquelado- liemisférico, tan largo como el estilo y pubescentito. Aquenios 4, separados ó apareados : keliotropium, F. 66, T. III. 672. Planta herbácea bisanual, pelierizada> cuyo tallo se eleva á l'-l 1[2' cuando está para florear, con hojas radicales, simples, en- teras, pecioladas, bastante grandes y oval-lanceoladas, muy ásperas, en el tallo son mas pequeñas, sentadas y decurrentes, alternas. Flores azules ó á veces blancas en panojas terminales, pediceladas y pendientes, de cáliz monosépalo, 5-partido, con los segmentos es- tendidos y lineares; corola enrodada, cuyas 5 lacinias son muy es- trechas y puntiagudas : de la garganta salen 5 apéndices obtusos, escotados, lisos, lustrosos y negros; pstambres cuyo filamento muy corto se prolonga en un cuernecillo situado un poco por afuera de la inserción de las anteras, grandes y erguidas. Cuatro ovarios unilo- culares, del centro de los cuales sale un estilo simple que se termina por un estigma cabezudo. El fruto consiste en 4 aquenios ó nuececi- tas converjentes, arru2:ados y de vértice redondeado : iorrago, F. 66, T. Y, S.-T. I. ^ 673. Estambres seis, 674. — Mas de 6 estambres, 675. 674. Cáliz 5-sppalo ó 5-partido, de segmentos imbricados; corola campanuda 6, 5-loba ; estamibres opuestos á los lóbulos de la corola y alternando al contrario con algunos apéndices estériles. Ovario 12, 4-locular, con los óvulos ascendentes. Baya mas ó menos gruesa, de semillas crustáceas provistas de un endospermo, 635. — Cáliz con 6, 8 sépalos dispuestos en dos series; corola enrodada 6, 8-partida, can apéndices en número doble y pareciendo los segmentos entre los cuales están apareados, divisiones de la corola opuestas á los sépa- los. Estambres opuestos á los lóbulos de la corola, alternando con tantos apéndices interiores, con anteras aflechadas y estrorsas. Ova- rio 6, 8-locular, con óvulos ascendentes de los cuales la mayor parte abortan, algunos ó uno so'lo quedándose. Baya bastante gruesa oligo ó unisperma por aborto, semillas con endospermo espeso, cartilaji- noso y oleajinoso, 629. 675. Menos de 14 estambres, 676. — Catorce estambres y mas, 681. 676. Ocho estambres, 677. — Diez estambres, 678. 677. Mata suculenta, vivaz, de tallo corto, mas ó menos ramoso, que se alarga mucho para echar las flores, y entonces alcanza 2' á 3' de alto, con hojas compuestas é imparipi nadas ó simples y opues- tas, pecioladas, muy espesas, carnosas y suculentas, con 1, 5 hojue- las aovadas festoneadas, lampiñas y como glaucas. Flores rojizo- amarillentas, en panojas terminales, pediceladas y cabizbajas, de 312 • MÉTODO DICOTÓMICO. cáliz campanudo, inflado, membranoso, cortamente 4-fido; corola campaniforme, claviforme en la parte superior j mas ancha, de base prismática y cortamente 4-fida, algo mas grande que el cáliz y de segmentos iguales j algo doblados hacia fuera ; estambres inser- tos en el tubo de la corola é inclusos. 4 ovarios ovales puntiagudos j terminándose cada uno por un estigma; su base está acompañada de una escama nectariforme. El fruto consiste en 4 carpidios capsu- lares lare^os, puntiagudos, uniloculares y polispermos : hryophyl- lum, F. I4n, T. I. 678. Cáliz acompañado de dos brácteas que nías luego se vuelven carnudas, envuelven la cápsula de manera á simular una baya ; co- rola con 10 lacinias; anteras grandes de ápice bifido, 679. — Las dos brácteas escamosas que acompañan al cáliz no se vuelven nunca carnudas; corola con 10 lacinias; anteras grandes de ápice aguzado, cuyos filamentos salen de un anillo nectariforme; baya con 6 surcos, 680. 679. Primorosos arbustos de 1' á 5' de alto, ramosísimos, con ho- jas simples, alternas, casi sésiles, ovales, aguzadas, enteras ó algo dentadas; flores en espigas axilares, pediceladas, pendientes, blan- cas mas ó menos teñidas de encarnado y que vse componen de un cá- liz monosépalo 5-dentado; corgla oval, ventricosa, con 5 segmentos cuyos bordes están doblados por afuera; estambres inclusos, insertos en el tubo de la corola y cujos filamentos aplanados llevan anteras de ápice bifido, terminándose por una cerda cada lóbulo, son acom- pañados de ordinario por la base de tantas escamas hipójinas reuni- das con ellos. Ovario sentado sobre un disco glanduloso, casi semi- ínfero, de cuyo ápice sale un estilo simple y derecho que se termina por un estigma sencillo y algo cabezudito. Cápsula 5-locular, de de- hiscencia loculícida, pero que parece baya á primera vista, contiene algunas semillas : gaulteria, F. 81, T. II. 680. Planta herbácea de tallo fruticoso, derecho, simple, nudoso, como del tamaño del dedo meñique, lleva hojas simples, opuestas, enteras, largas de 12" y anchas de b" , con la base aguzada y vol- viéndose peciolo muy corto. Flores terminales, con pedúnculos tri- cótomos que tienen una vaina por la base, pediceladas, opuestas, acompañadas de dos escamas, y de cáliz turbinado 5, 4-partido algo espeso y como dorado; corola tubulada, mas corta que el cáliz, con 10 segmentos empizarrados; estambres derechos, de filamentos mas cortos que las anteras é insertos en un anillo nectarífero ; anteras grandes elongadas, verdes y de ápice algo aguzado. Ovario ovoideo, 3-locular, poliovulado, de cuyo ápice sale un estilo corto que se termina en un estigma escutiforme. Baya casi redonda y un poco oval á la par, del tamaño como de una cereza, con 6 surcos, trilocu- lar y polisperma : potalia, F. 61 , Or. IV. 681. Siempre 14 estambres ; cáliz y corola de 7 divisiones; cáp- sula 7-locular polisperma, 682. — Estambres muchos y en número indeterminado; cáliz de 6 sépalos cuyos 2 esteriores son mas peque- ños; baya coriácea multilocular que, desprendida la concha, parece una fresa colgante. Flores entremezcladas con brácteas claviformes y ascidiformes ó casi pareciendo un jarrito, 683. VEJETALES HERMAFPvODITOS MO^^OPÉTALOS. 313 682. Arbustos bajitos como de 4' á 6' de alto, peludo?, mas ó me- nos ramosos, con hojas simples, alternas, sentadas, enteras, algo ovales Y puntiagudas ; flores coloradas en espigas terminales flojas, pediceladas, v de cáliz cujas divisiones profundas, estrechas, ob- aovadas y obtusas son pendientes ; estambres salientes insertos en la garganta de la corola. Ovario ovoideo, casi polígono, de cuyo ápice sale un estilo simple algo larguito que se termina por un estig- ma algo cabezudo. Cápsula de 1 celdas, polisperma : befaría, F. 81, T. III, S.-T. II. 683. Arbustos trepadores que parecen parásitos, sin serlo verda- deramente, cuyos tallos poco ramosos^ trepan derechos, especial- mente en el estipe de las palmas de yagua subiendo así casi hasta su vértice, comprimidos, y con 4 caras, de las cuales la que está apli- cada al árbol es algo cóncava y provista de garras con que se agarra de la corteza de los árboles á lo largo de los cuales sube, de corteza color ceniciento ; hojas elípticas, simples, dísticas, subsesiles ó ape- nas pecioladas y aplicadas ó pegadas á la corteza de los árboles al favor de chupadores de que está provista su circunferencia ; mas luego de tales tallos ordinariamente sencillos y larguísimos salen ramos cilindricos estendidos, de ningún modo trepadores largos de 2' á 3' algo mas ó menos, dísticos ó esparcidos, con hojas alternas, algo teñidas de morado claro cuando tiernas, cortamente peciola- das, lanceoladas, aguzadas por ambos estremos y puntiagudas. Flo- res en umbelas ó racimos acorimbados, pediceladas, con brácteas espatuladas, convexas por arriba y cóncavas interiormente, insertas algo por debajo del medio de los pedicelos, otras veces son con forma de urna, clavi formes y saliendo de los pedicelos de las flores aborta- das del centro de la umbela; tales flores son verduscas y de cáliz monosépalo con las divisiones interiores redonditas; corola caliptroe- forme, circuncisa. Estambres de filamentos cortos, subulados y es- tendidos, con anteras lineares y articuladas con ellos, un poco por encima de la base, no mucronadas. Ovario con 12-4 celdillas in- completas, estriado lonjitudinalmente; estigmas decurrentes en la punta obtusita del ápice : marcgraaxia, F. 98. 684. Ovario semi-infero ó soldado solamente con la parte inferior del cáliz, 685. — Ovario infero ó soldado enteramente con el cáliz, 691. 685. Estambres soldados entre si y epijinicos, 686 686. Corola bi ó unilabiada, 688. — Corola hipocrateriforme, lar- gamente tubulada y blanca, 687. 687. Planta herbácea vivaz, muy lechosa, pubescente, cuyo tallo herbáceo, blando y simple se eleva á 8" ó 15" y lleva muchas hojas, simples, alternas, lanceolado-oblongas, sinuoso-dentadas, aguzadas por la base sub-sentada, obtusas, largas de 3"-4". Flores solitarias, axilares, con dos brácteas lanceoladas situadas hacia el medio del pedicelo corto, y de cáliz monosépalo semi-adherente, turbinado, con 5 ángulos y cuyo limbo es partido en 5 segmentos lanceolados, puntiagudos, casi dos veces mas largos que él, dentados y velludos ; corola hipocrateriforme, oblicua, de tubo casi tan largo como las hojas 2 1|2" á 3", filiforme, cilindrico, de base bastante crecida y como ventruda pegada en la garganta del cáliz y con 4 ángulos que 314 MÉTODO DICOTÓMICO. no tardan en desaparecer, Telludo y sosteniendo un limbo estendido y de 5 divisiones casi iguales, lanceolado-lineares y puntiagudas; estambres 5 adheridas entre sí por los filamentos y de anteras cohe- rentes, insertos en el medio del tubo de la corola en donde están libres sus filamentos que llegados á la garganta se reúnen y se sol- dan entre sí para formar un tubo corto y cilindrico, con 4 surcos poco pronunciados que corresponden con los que separan las celdas de las anteras oblicuas, bastante largas, cuyas dos superiores están mucho mas largas que las inferiores, con el ápice provisto de pelos blancos que. antes de verificada la florescencia tapan el estigma, mientras que después forman como una corona en deredor suyo. Ovario semi-ínfero, bilocular, poliovulado y de cuyo ápice oblicuo y puntiagudo sale un estilo filiforme, muy largo terminado por un es- tigma que se presenta por encima del ápice de las anteras y en me- dio de la corona blanca ya señalada, ancho, bilabiado, con el centro verde y glanduloso-viscoso cuyo labio inferiores algo cóncavo y pa- reciendo la boca de una boccina. Cápsula como inflada, bilocular, bivalvo y abriéndose por el vértice, conteniendo muchas semillas muy finas. Toda la planta exhala un olor viroso particular y bas- tante fuerte : isotoma, F. 57, T. 11. 688. Corola bilabiada, 689. — Corola unilabiada, 690. 689. Plantas herbáceas anuales ó vivaces, muy lechosas, cuyo ta- llo derecho y poco ramoso se eleva á 18' -12''-8", lampiñas, alampi- ñadas ó pubescentes, con hojas simples, alternas, sub-enteras, fes- toneadas ó dentadas, pecíoladas ó sésiles y decurrentes, aovadas ó lanceoladas, largas de 2"-18'"-6"'. Flores en espigas terminales, pediceladas y que salen de la axila de una bráctea foliácea de tama- ño muy variado, y de cáliz semi-adherente, anguloso, 5-fido, con segmentos bastante largos, lanceolado-subulados; corola muy irre- gular, cuyo tubo está hendido por su lado anterior, vuelto superior por torsión, bastante largo y de base como ventruda, de limbo con 5 lóbulos desiguales y bilabiado; estambres 5, cuyos filamentos sol- dados entre sí y anteras coherentes forman un tubo atravesado por un estilo filiforme, largo, simple y terminado por un estigma 2-lobo que se presenta por el ápice del tubo formado por las anteras raras veces lampiñas, pero con mayor frecuencia barbudas por el ápice, sea dos solamente sea todas. Cápsula bilocular, polisperma, bivalvo y abriéndose por el ápice, coronada por el limbo calizinal : lohelia, F. 57, T. 11. 690. Plantas herbáceas vigorosas ó matas y hasta arbustos muy lechosos, cuvo tallo mas ó menos ramoso v derecho se eleva á r-4', con hojas alternas, simples, á veces aproximadas hacia el vértice, mas ó menos decurrentes y sentadas, pecioladas ó subsesiles, lan- ceoladas, lineares, linear-lanceoladas, lanceolado-oblongas, con una punta, mas ó menos aguzadas á vecas por ambos estreñios, aserra- das, con dientes espiniformes ó lineares, algunas veces mucronadi- tos, largas de 8"-5"-4"-3"-12"-6"-15". Flores de ordinario purpú- reo-moraduscas, algunas veces amarillas ó azafranadas, en racimos mas ó menos foliáceos, largos, grandes, multííloros y que parecen espigas, pediceladas y saliendo de la axila de una bráctea foliácea VEJETALES HEEMAFRODITOS MONOPETALOS- 315 mas ó menos grande, con frecuencia unilaterales, j de cáliz semi- ínfero 5-lobo, de tubo hemisférico ó globoso, cuya cara anterior está longitudinalmente hendida, encorvada, plana ó cóncava, labio infe- rior 3-lobo, acompañado de dos lóbulos laterales mas ó menos diver- jentes, al concluirse la florescencia : á menudo las 5 piezas ó pétalos que la forman se separan; estambres 5 adheridos, cuvas anteras todas son barbudas por el ápice ó solamente las dos inferiores. Cáp- sula semi-ínfera y algunas raras veces libre, polisperma j abrién- dose por dos ventallas : tupa, F. 57, T. II. 691. Anteras libres. 692. — Anteras soldadas entre sí 763. 692. Menos de 5 estambres, 693. — Cinco estambres ó mas, 709. 693. De 1 á 4 estambres ; fruto aqueniforme penachudo, 694. — Siempre 4 estambres; fruto seco ó carnudo, 695. 694. Plantas herbáceas de ordinario vivaces, de tallo derecho mas ó menos ramoso, alto de 2' á o j saliendo casi siempre de un rizoma mas ó menos desarrollado, con hojas radicales simples, pe- cioladas, dentadas, opuestas, cuja base del peciolo es un poco en- vainadora, mientras las caulinares son compuestas ó pinatífidas. Flores pequeñas blancas j dispuestas en corimbos ó en panojas ter- minales pedunculadas j acompañadas de hojas florales, pediceladas j saliendo de la axila de una bráctea; cáliz dentadito y á veces de limbo enrollado hacia dentro; corola tubulada, con 5 segmentos de ordinario desiguales, ovales, obtusos, algo oblicuos y cuya base está algunas veces provista de un espolón ; 1, 2, 3, 4 estambres epíjinos por ser epijínica la inserción de la corola en la parte superior del tubo de la cual se insertan. Ovario unüocular ovoideo, de cuyo ápice sale un estilo que se termina por ] ó 3 estigmas. El fruto consiste en una especie de cápsula indehiscente, aqueniforme, con 3 celdas, de las cuales 2 abortan de ordinario , monosperma : valeriana, F. 60. 695. Flores agrupadas en una especie de receptáculo peludo y formando asjí una cabezuela, 696. — Flores nunca dispuestas en ca- bezuela, ó cuando lo son es ¡¡in receptáculo alguno, 697. 696. Matas ramosas, de hojas opuestas ó verticiladas por á 3, acompañadas de estípulas distintas ó algo coherentes. Flores ama- rillentas en cabezuelas largamente pedunculadas, axilares ó termi- nales, sésiles en un receptáculo esférico y de cáliz monosépalo, an- guloso y en forma de pirámide inversa, con 4 dientes ; corola infun- dibuliforme con 4 segmentos iguales y enderezaditos; estambres insertos en la parte superior del tubo delgado de la corola j algo esertos. Ovario ovoideo, de cuyo ápice sale un estilo simple muy largo, eserto y terminándose en un estigma globoso y cabezudo á la par. El fruto consiste en una cápsula inversamente piramidal, co- riácea, coronada por los dientes del cáliz, bilocular, partible, cuyas celdas monospermas están frecuentemente vacías por causa de aborto, con semillas oblongas, cuyo embrión inverso y contenido en un endospermo algo cartilajinoso tiene su raicilla superior : cepka- lantJius, F. 62, Or. I, T. VÍI.. 697. Fruto seco; óvulos pegados lateralmente; semillas provis- tas de endospermo, con embrión encerrado y la raicilla inferior; 316 MÉTODO DICOTÓMICO. corola de lóbulos valvares; estípulas trabadas opuestas á las hojas, divididas en cerdas y raras veces obsoletas, 698. — Fruto carnudo, •725. 698. Formado de cocos dehiscentes ó indehiscentes, 699. — Fruto capsular ó abajado, con 2 celdas, "706. 699. Fruto formado de 3, 4 cocos indehiscentes, asurcados por el lado interno y por fin adheridos con la semilla; limbo calizinal 6, 4 y raras veces 7, 3-partido y deciduo, 700. — Fruto compuesto de dos cocos dehiscentes ó indehiscentes; limbo calizinal con 4, 2 ó raras veces 10 segmentos persistentes, 701. 700. Planta herbácea, pubescente, desparramada, de tallo peludo, con hojas simples, opuestas, lanceolado-oblongas ó elípticas; cerdas estipulares tan largas ó mas cortas que su vajina: flores en cabezue- las terminales, pero sin receptáculo, acompañadas de un involucro formado de 4 hojas conteniendo algunas flores blancas, de cáliz mo- nosépalo adherente, con 6 segmentos foliáceos, aovado-deltoídeos, tan largos como los 3ó 4 carpidlos troncado-obaovados y muricados; jde una corola infundibuiiforme, con 6 lóbulos valvares; estambres esertos; estigma 3, 4-fido : fichar dsonia, F. 62, Or. I, T. VI, S.-T. I,G.IV. 701. Ambos carpidios indehiscentes, 702. — Ambos carpidlos de- hiscentes ó uno solo, 703. 702. Plantas herbáceas ó matas, de tallos tetrágonos ascendentes ó algo trepadores, mas ó menos pubescentes, lampiños ó pinchudos, con hojas simples, opuestas, sin venas y sentadas, ó con venas, ru- gosas y cortamente pecioladas, lineares, lanceolado-aguzadas, con una cerda terminal ú oblongo-lanceoladas y puntiagudas, revueltas por la márjen; cerdas estipulares setáceasó cerdoso-peludas, otras veces largamente filiformes y flexuosas, á veces mas largas que su vaina. Flores sub-solitarias, .pocas ó una, otras veces 5 en las axilas de las hojas y de cáliz adherente, con lóbulos deltoídeo-lanceolados, obtusitos, lanceolado-lineares ó lanceolados, mucho m^s cortos que los carpidios, mitad tan largos como los carpidios ó una mitad o un tercio tan largos como ellos; corola blanca ó purpúreo-pálida infun- dibuliforme, con 4 segmentos valvares, de tubo delgado y obaovado, claviforme-campanudo escotado ó corto y casi tan largo como el limbo calizinal ; estigma escotado ó bífido. Fruto sub-globoso, lije- ramente aquillado, duro y pelierizado, con los carpidios no costillu- dos lateralmente; sub-globoso también y alampiñado y de carpidios 3-costilludos, ú ovoídeo-oblongo, alampiñado, duro, no costilludo y de carpidios enteramente lisos : diodia, F. 62, Or. I, T. VIH, G. II. 703. Ambos carpidios igualmente dehiscentes á lo largo de la cara interna, 704. — uno solo de los carpidios dehiscente á lo largo de la máijen de la' comisura, m>ientras el otro se queda cerrado por el tabique, 705. 704. Plantas herbáceas anuales ó matas perenniales, lampiñas, alampiñadas, pubescentes, peludas ó pinchudas, con tallos ramosos, derechos ó desparramados, sub-ciiínclricos ó de ordinario tetrágo- nos, con hojas elíptico-lanceoladas ó lanceoladas, oblongo-lanceola- das, elíptico-oblongas , aovadas, lanceoladas, linear-lanceoladas, VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPETALOS. 317 lanceolado-lineares, lineares, aguzadas, ac:udas. puntiagudas ú ob- tusas, sentadas, subsesiles ó cortamente pecioladas, lampiñas, pu- bescentes, peludas, escabrosas, pestañosas, cuvas Tenas son 5, 1, 7, 5, 1, 2, 4, 2, 3 yugadas ; cerdas estipulares setáceas mas largas, casi tan largas ó mas cortas que su vaina mas ó menos proeminente, lampiñas ó ásperas, ó lineares pestañudas y mas largas que su vaina. Flores en verticilos axilares, en cabezuelas v raras veces cimosas no muchas ó á veces solitarias involucradas ó no, blancas ó lijera- mente teñidas de rosado, y de cáliz monosépalo adherente con 4 dientes diminutos iguales, aovados, lanceolado-subulados, ó deltoí- deo-lanceolados iguales, mucho mas cortos, casi tan largos ó 1^4, 1[3 tan largos como el fruto; con 2 ó 4 dientes lanceolados obtusos ó aguzados \\2, 1{3 tan largos como el fruto, en fin con 2 dientes solamente lineares v por fin apenas notables, deltoídeos ó lanceola- dos 1|4 ó lp3 tan largos como el fruto diminuto ; corola infundibuli- forme, con 4 lóbulos valvares. Estigma escotado ó bífido. Fruto sep- tícido por encima del medio, con el tabique persistente debajo de él, ó de dehiscencia septícida por la base, con el tabique desvaneci- do : iorreria, F. 62, Or. I, T. VIII, G. XII. 705. Planta herbácea anual de tallo obtusangular, pubescentita ó alampiñada, con hojas lanceoladas ó á veces lanceolado-lineares, aguzadas, de cara superior escabrosa ó solo hacia la márjen, opues- tas simples, subsesiles ó pecioladas; cerdas estipulares filiformes, mas largas que su vaina. Flores en grupos axilares paucí ó pluríflo- ros, j de cáliz con 4 dientes diminutos, deltoídeos, mucho mas cor- tos que los carpidlos, de los cuales 3 corresponden al cerrado y uno solo al abierto, ó apenas notables; fruto obaovado-oblongo, con se- millas diminutamente rugosas : sjjerrjiacocce, F. 62, Or. I. T. VIII, G. X. 706. Una cápsula, 707. — Una baya apenas carnuda, 708. 707. Plantas herbáceas anuales lampiñas o alampiñadas, de tallo delgado mas ó menos ramoso, con hojas lanceoladas, lineares ó ii- near-lanceoiadas, 1-nervias, aguzadas, sentadas, opuestas, enteras y largas de r'-2" ; cerdas estipulares 3, algunas ó reducidas. Flores pediceladas en umbelas y corimbos ó sub-solitarias, pedicelos de or- dinario mas cortos que los pedúnculos ó fasciculados cuando faltan aquellos, otras veces sub-solitarioS; filiformes y mas cortos que las hojas; cáliz adherente con 4 dientes distantes del fruto: corola corta infundibuliforme ó enrodada, con los lóbulos tan largos ó mitad de lo largo del tubo, valvares ; estambres insertos en ó hacia la gar- ganta de la corola, ó dioicamente cerca de la base de la corola, cu- yas anteras son ovoideas. Cápsula delgada, loculícida por el ápice, troncada, sub-globosa ó globosa j contraída por la comisura, con dientes lanceolado-aguzados; semillas diminutas, angulares y no cóncavas : oldenlandia, F. 62, Or. II, T. VIII. • 708. Plantas herbáceas ó matas muy ramosas, de tallos rastreros nías ó menos largos, pubescentes ó velludos,, con liojas simples, opuestas, pecioladas, enteras, aovado-subagudas ó aovado-redondi- tas subagudas ó mucronadas, con las venas arqueadas; estípulas pronto caducas linear-aa'uzadas ó cerdáceas mucho mas cortas ó tan 318 MÉTODO DICOTÓMICO. largas como los peciolos, situadas sobre un ribete membranoso que une los dos peciolos. Flores azules ó purpurinas, mas ó menos pedi- celada?, en grupos axilares, j de cáliz adherente 4-partido, acompa- ñado de dos brácteas lineares, tan largas ó mas cortas que él, con los segmentos lineares tan largos como la baja globosa ó lanceola- do-lineares j mas cortos que ella; corola infundibuliforme ; estam- bres insertos en el tubo de la corola, inclusos j de anteras oblongas. Estilo simple tan largo como los estambres terminado por un estig- ma bífido, cujas divisiones diverj entes, cilindricas j glandulosas son un poco espesas j dobladas hacia fuera, j que sale del ápice de un ovario verdusco y velludo 2-locular, polio vulado v sentado sobre un disco verdoso algo 4-lobo. Baja globosa, algo comprimida y co- ronada, poco carnuda, azul, bilocular polisperma : coccocypselum, F. 62, Or. II, T. IV. 709. Cinco estambres, "710. — Mas de cinco estambres. '710. Fruto capsular, 711. — Fruto carnudo abajado ó drupáceo, 724. 711. Lóbulos de la corola valvados, 712. — Segmentos de la corola imbricados, 713. 712. Árbol bajito ó arbusto de 10' á 15' de alto, lampiño, con ho- jas simples, opuestas, grandes, pecioladas, obaovadas, casi tan lar- gas como los pedúnculos axilares, j que tienen 6" á 10" de largo ; estípulas interpeciolares grandes j deciduas. Flores fragantes, en corimbos terminales ó en panojas axilares pedunculadas, y de cáliz adherente 5-dentadito, cujos dientecitos son distantes; corola in- fundibuliforme con 5 lóbulos cortos, pubescentes por dentro, ver- doso-blanca, de tubo claviforme, largo de 6'", con los segmentos re- duplicados en el botón, aovado-red ondeaditos j largos del \\^" . Estambres inclusos, insertos en el tubo de la corola, de filamentos velludos j con anteras recostadas. Estigma bilamelado. Cápsula oblonga loculícida desde el medio por arriba y por abajo, las valvas quedándose unidas por el ápice, conteniendo semillas diminutas, paralelas á la placenta, abroqueladas, comprimidas, marjinales y coludas por ambos estremos ; larga de \" : macrocnemum, F. 62, Or. II, T. V, G. XVI. 713. Cáliz con 6 ó raras veces 5 y 7 segmentos profundos subu- lados y filiformes; semillas ceñidas por una ala grande, entera y oblonga, 714. — Cáliz 5, 4-partido solamente, 715. 714. Árbol no muy grande ó arbusto de ramitas lampiñas, con hojas aovadas ó eliptical-oblongas, sub-agudas por la base, de cara superior lampiña, mientras la inferior es alampiñada, puntiagudas ú obtusas, variables y largas de l"-3". Flores grandes rosado-páli- das, ternado-solitarias y terminales, y de cáliz adherente ; corola infundibuliforme, desigual inferiormente, con lóbulos imbricativos, aovados, puntiagudos, mucho mas cortos que el tubo, arqueado, claviforme y lampiño, que tiene i"-2", mientras ellos son largos de 4'" solamente ; estambres esertos, libres de la corola, de anteras lineares, erguidos y largos de 6'". Cápsula septícida y por fin locu- lícida por arriba, sub-comprimida, de ordinario negra, con puntitos YEJETALES ÍIERMAFRODITOS MONOPÉTALOS- 319 blancos y larga de 8'"-12"' : conéarea, F. 62, Or. II, T. YI, G. XVIII. *715. Cáliz 5 ó 4-particlo j semillas mas ó menos aladas, 716. — Cáliz siempre de limbo 5-partido j semillas sin ala, 721. 716. Estambres esertos mas ó menos; semillas aladas, 718. — Es- tambres inclusos ó raramente semi-esertos é insertos en el tubo de la corola; semillas diminutas y apenas aladas, 717. 717. Arbustos y raras yeces árboles bajitos, con hojas simples, opuestas, eliptical-oblongas, elípticas, aovadas, lanceolado-elípticas, lanceolado- oblongas, obaovadas, obaovado-oblongas, oblongas, es- patuladas, oval-oblongas, espatulado-oblongas, puntiagudas por el ápice j á veces por ambos estremos á la par, con una punta obtusita, cuspidadas, obtusas y obtusitas, cortamente aguzadas ó redondas y obtusas por la base, membranosas, cartáceas ó coriáceas, lampiñas, peludas por la cara superior y también por la inferior, que es ade- más pubescentita, alampiñada ó pelierizadita sobre las nervaduras solamente, etc.; estípulas subulado-deltoídeas, deltoídeas, deltoídeo- subuladas, subuladas, velludas, lanudas, peludo-pubescentes, pin- chudas, pubescentes por dentro. Flores en panojas ó en cimas sim- ples ó en grupos, raramente solitarias, con el último brazo de la cima frecuentemente 3-floro, y de cáliz adherente de ordinario bracteado por la base, con los segmentos del limbo diminutos, dien- tiformes y mucho mas cortos que el tubo, ó estrechos tan ó mas lar- gos que el tubo, en fin aovados ó lanceolados, tan ó mas largos que el tubo ; corola infundibuliforme, raramente enrodada, con un anillo calloso en la garganta, cuyos 5, 4 lóbulos redondeaditos son imbri- cativos. Estigma 2-fido ó escotado. Cápsula sub-globosa, loculícida, con las valvas por fin frecuentemente 2-fidas : rondeletia, F. 62, Or. II, T. YI. 718. Cáliz 5, raramente 4-partido ó 5-fido, 719. — Cáliz 4 y raras veces 5-partido, y frecuentemente con algunos dientes ó segmentos accesorios; estambres ordinariamente semi-esertos é insertos cerca de la garganta de la corola, 720. 719. Cáliz 5 y raramente 4-partido ; estambres esertos y libres de la corola, 719 Ms. — Cáliz de limbo apeonzado, con el limbo 5-fido y persistente. Arboles á veces muy grandes, de hojas alternas, sim- ples, coriáceas, cortamente pecioladas, llanas por la márjen, acom- pañadas de estípulas aovadas ú oblongas, foliáceas, libres y deciduas. Flores terminales apanojado-corimbosas, blancas ó rosadas, teñidas de púrpura; corola de tubo rollizo con el limbo 5-partido, de lóbulos oblongos, cuya estivacion es valvar ; filamentos de los estambres cortos insertos por la parte media del tubo, con anteras lineares en- teramente inclusas. Estigma bífido sub-claviforme. Cápsula aovada ú oblonga con un surco visible por cada lado, bilocular, coronada por el cáliz y de dehiscencia septícida, cuyos mericarpios se separan de la base hacia el ápice, quedándose la parte introflexa disjunta. Placentas oblongas con muchas semillas erguidas y empizarradas hacia arriba : chichona, F. 62, Or. II. T. Y, G. XYII. 719 lis. Arboles altos, bajitos ó arbustos de 10' á 15', muy ramo- sos y lampiños, de hojas simples, opuestas, enteras, mas ó menos 320 MÉTODO DICOTÓ-MICO. pecioladas, elípticas ú oblongas, obaovadas, lanceolado-oblongas ó lanceolado-elípticas, cartáceas, lustrosas y lampiñas, largas de 4"- 6"-3"-2". Flores en corimbos terminales á veces apanojados ó axi- lares, pediceladas, cuyos pedicelos son tan largos como el tubo cali- zinal cilindrico, aovado, y por fin tan largos ó los inferiores mas largos que él; cáliz adherente; corola liipocrateriforme, con el tubo filiforme y muy largo, casi tan largo como los lóbulos ó dos veces tan largo como ellos ; estilo filiforme tan largo como los estambres y eserto también, terminado por un estigma un poco e¿pe¿o. Cáp- sula septícida, con las valvas enteras y por fin bífidas, conteniendo semillas ovales y aladas : exostemma, F. 62, Or. II, T. VI, G. XIX. 720. Arbustos sarmentosos ó matas lampiños, pubescentes *c) pe- lierizaditos, de hojas simples, opuestas, enteras, aovadas con una punta tiesa ó aguzadas, membranosas ó cartáceas, gubsesiles ó cor- tamente pecioladas ; estípulas cortamente subuladas, sub -troncado- dentaditas ó deltoídeas y dentaditas. Flores en cimas acorimbadas axilares, paucífloras, sub-sentadas ó mas ó menos largamente pe- diceladas ó solitarias y de cáliz adherente, cuj^os 4 segmentos lan- ceolado-lineares alternan con 4 dientes diminutos, 4, 5 aovados ó aovado-lanceolados y puntiagudos desprovistos de dientes alternan- do con ellos, en fin 8 subiguales, lanceolado-lineares y sin dientes accesorios ; corola hipocrateriforme azul, carmesí pálido ó roja, con 4, 5 lóbulos imbricativo's, de tubo sub- cilindrico, con pelo esparcido por dentro, la garganta siendo lampiña ó barbuda, ó claviforme por el ápice un poco peludo interior y esteriormente ; estambres de fila- mentos cortos con anteras oblongo-lineares ó lineares y semi-eser- tas, otras veces inclusas. Estigma bíñdo. Cápsula contraída por la comisura y septícida: mauetíia, F. 62, Or. II, T. VI, G. XXII. 721. Todas las divisiones calizinales quedándose semejantes; es- tambres inclusos, libres de la corola, de anteras lineares y erguidos, 722. — Uno de los lóbulos del cáliz en el corimbo transformándose en una hoja grande y peciolada ; estambres esertos, insertos en la garganta de la corola y de anteras incumbentes, 723. 722. Arbustos de 3' á 12' de altura, lampiños, de hojas corta- mente pecioladas, simples, opuestas, enteras, coriáceas, elípticas, eliptical-oblongas, oblongas ó aovadas, con una punta, lustrosas, venosas ; estípulas deltoídeas ó aovadas, subulado-redondeaditas. Flores grandes blanquecinas ó carmesí, solitarias ó temadas, cor- tamente pedunculadas y axilares; de cáliz con los segmentos foliá- ceos elíptico-lanceolados, linear-aguzados ó lanceolado-aguzados ; corola infundibuliforme, cuyo tubo largo se va gradualmente agu- zando hacia la base estrecha, con lóbulos plegados y recargativos redondeado deltoídeos, de los cuales uno es esterior, larga de 8"- 7"-5"-3". Anteras largas de 2"-14"'-8" -6'". Estilo filiforme con un estigma espesito. Cápsula loculícida, elíptica, 5-costilluda ó lisa, otras veces oblonga y aguzada por la base, larga de l"-2"-8'"-10'", conteniendo semillas comprimidas, diminutamente hoyosas v sin ala : portlaruUa, F. 62, Or. II, T. VI, G. XI. 723. Arboles de hojas obaovado-oblongas, simples, opuestas, en- teras, puntiagudas, lijeramente pelierizadas sobre los nervios de la VEJETALES HERMAEEODITOS :M0N0PÉTAL0S. 321 cara inferior j largas de 12,18'", anchas de 6'". Flores en corimbos contraidos y dispuestos en panojas largas, racemiformes, y de cáliz adlierente cuyo lóbulo transformado es oval, obtuso por el ápice, cortamente aguzado por la base, reticulado, encarnado y largo como el peciolo, largo de 3" y ancho de 1 lt2"-l 1|4"; estigma bilobado. Cápsula septícida, conteniendo semillas fusiformes y no aladas: warszeiciczia, F. 62, Or. II, T. VI, G. XX. "724. Fruto abayado, 725.— Fruto drupáceo, 748. 725. Baya con las celdillas polispermas, ó un nuculanio, 726. — Baya con las celdas monospermas, 735. 726. Siempre una baya ; hojas simples estipuladas, 727. — Un nucul|nio, hojas compuestas y sin estípulas, 734. 727. Lóbulos de la corola retorcidos y recargativos ; placentas parietales con algunas semillas, 728. — Segmentos de la corola re- cargativos ó retorcidos ó valvados; muchas semillas, 729. 728. Arboles bastante altos, ramosos y coposos, ó arbustos, con hojas simples, opuestas, pecioladas, enteras, cartáceas, lanceolado- oblongas ú obaovadas, á veces sub-troncadas por el ápice, lampiñas ó de cara inferior pubescente ó alampiñada, largas de 5"-10"-6"-8"- 4"-2". Flores amarillas ó blanquecino-amarillentas, en cimas ter- minales pediceladas y cuyos pedicelos son mas cortos ó tan largos como el cáliz, y de cáliz con el limbo campanudo, troncado ó 5-den- tado, á veces ondeado ó 5-fido con los segmentos lineares y distan- tes; corola hipocrateriforme , de tubo cilindrico, cortamente eserto y tan largo como los lóbulos en número de 5 y torcidos por la iz- quierda, sedosa y de garganta pelierizada, pinchudo-tomentosa por ambos lados, ó lampiña, larga de r'-6"'-8'" ; estambres insertos por debajo de la garganta de la corola ó en ella con las anteras semi- esertas ó salientes del todo, lineares y subsesiles. Estigma clavi- lorme ó 2-fido con los lóbulos lanceolado-cerdosos ; ovario 1-locular, con dos placentas, casi tocándose el uno y el otro en el eje. Baya pareciendo 2-locular por ser contiguas ó enredadas las placentas, ovoidea, larga de 2"-3", troncada y de ápice ombilicado, cuyas se- millas horizontales son contenidas en la pulpa, de endospermo car- tilajinoso : genipa, F. 62, Or. II, T. I, G. II. 729. Lóbulos de la corola recargativos ó torcidos ; óvulos muchí- simos ó dos solos anidados en las placentas centrales y espesos, 730. — Segmentos de la corola recargativos solamente; muchísimos óvu- los superficiales sobre las placentas centrales, 731. 730. Arbustos muy ramosos, derechos, altos de 6' á 10', espinosos ó inermes, espinas opuestas y supra axilares ó por á 4 y situadas por debajo del vértice de las ramitas; hojas obaovadas ó elípticas, lan- ceoladas ó lanceolado-elípticas, simples, opuestas, enteras, peciola- das, membranosas, membranáceas y por fin á veces coriáceas, lam- piñas del todo, alampiñadas, ó de cara inferior algo pubescente, largas de r'-2"-3"; estípulas interpeciolares subuladas, pequeñas, casi escamosas, solitarias. Flores blancas, fragantes, subsesiles ó pediceladas, solitarias, temadas ó agrupadas, axilares ó terminales; cáliz adherente, de limbo campanudo con los dientes distantes, lan- ceolados, obtusitos y recorvados, 5-partido ó 5-fido con los segmen- TOMO I 21 322 MÉTODO DIC0TÓ:\1IC0. tos lineares abiertos ó subulaclo-cerdosos, erg-nidos y distantes; corola hipocrateriforme , de tubo sub-ciiíndrico ó cilindrico tan largo, 4 ó 2 veces tan largo como los lóbulos aovado-oblongos ó aovados, aovado-lanceolados, velludo interiormente ó á veces este- riormente, de garganta lampiña ó velluda ; torcidos ó torcido-re- cargativos. Estambres esertos, con anteras sentadas en la garganta de la corola. Ovario ovoideo 2-locular poliovulado, de cuyo ápice sale un estilo simple tan largo como la corola, terminándose por un es- tigma bíñdo, cuyos dos lóbulos desiguales y oblongos son espesos. Baya bilocular globosa ú ovoidea, coronada, algo corticosa, conte- niendo muchas semillas comprimidas, sin alas y paralelas á las pro- yecciones de las placentas : randia, F. 62, Or. II, T. II, G. XIV". 731. Bava con 5 surcos, '732. — Bava con 10 surcos, 133. 732. Arboles ó arbustos lampiños ó pubescentes, muy ramosos, con los ramos opuestos ó verticilados, de hojas simples, opuestas ó verticiladas por á 3 ó por á 4, enteras, membranosas, mas ó menos pecioladas, elípticas, lanceolado-elípticas, cuneiformes y elípticas á la par, con una punta ó cortamente aguzadas, lampiñas por ambas caras ó alampiñadas y pubescentes por la inferior, siendo con fre- cuencia lustrosa la superior, largas de 2"-3"-4" ; estípulas interpe- ciolares triangulares, algo foliáceas, derechas, aplicadas al tallo ordinariamente de 4 caras, con la punta frecuentemente vuelta ha- cia fuera. Flores rojas ó amarillas en cimas terminales, de las cua- les algunas están situadas lateralmente por el lado interno en los brazos racemiformes y escorpioídeos de las cimas, y de cáliz adhe- rente, como campanudo, de tubo turbinado por la base, aovado, ao- vado-sub-globoso ó campanudo, mucho mas largo que el pedicelo muy corto, de lo largo de él, ó solo del de las flores laterales, con 5 lóbulos ó dientes iguales, derechos , persistentes y puntiagudos ; corola tubular ó campanuda por encima de la base, de tubo plegado,, estrechado por encima de la base, lampiño ó lijeramente dilatada por encima de ella, sub-cilíndrico pubescentito ó alampiñado, en fin campanulado-tubular por encima de ella, cilindrico y 6 veces mas largo que los segmentos del limbo sub-erectos, ó redondos y abier- tos, otras veces aovados; y largo de 18'"-12"'-8"'-6"', con los lóbulos recargativos. Estambres insertos por encima de la base de la corola y hacia la garganta, inclusos, de filamentos muy cortos que llevan anteras lineares, erguidas, con el vértice algo eserto. Ovario único, oval, 5-locular, poliovulado y de cuyo ápice sale un estilo tan largo como los estambres y que se termina por un estigma entero, clavi- to rme y 5-asurcado. Baya 5-locular, con 5 surcos, elevándose por encima del tubo calizmal, ovoidea ú oblonga y ancha de 6'"-5"'-2'", y larga de 8"'-6'''-3'", coronada por el limbo calizinal y de ápice umbilicado : hamelia, F. 62, Or. II, T. III, G. XV. 733. Matas cilindricas, ramosas, derechas, algo nudosas, de como 2' -3' de alto algo mas ó menos, con hojas simples, opuestas , aguza- das por ambos estremos, ovalo-lanceoladas, puntiagudas, enteras, coriáceas, cortamente pecioladas ; estípulas interpeciolares, mem- branosas, con 2, 4 dientes, triangulares y puntiagudas, de base tra- bada con las hojas. Flores pequeñas blancas ó rosaditas en panojas YEJETALES HEEMAFKODITOS ^.íONOPÉTALOS. 323 terminales, cuyos pedicelos están acompañados liácia la inserción de 2 brácteas escamosas, largas y agudas, j de cáliz monosépalo ad- herente algo campanudo, cuyo tubo oval lleva un limbo 5-partido, con segmentos iguales, estrechos, largos y puntiagudos, acompaña- do de 3 escamas estrecha,s, largas y puntiagudas situadas por la base; corola infundibuliforme de tubo algo crecido y giboso, con 5 divi- siones iguales, eslendidas y agudas ; estambres de filamentos cortos insertos en el tubo de la corola é inclusos. Ovario redondo, cuj^o ápi- ce está adecuado con 5 glándulas amarillentas, de cuyo centro sale un estilo simple terminándose en un estigma bífido ú obtuso, Bava 10-estriada : nonateUa,F. 62. 73^. Árbol bajito, ramosísimo, ó arbusto de ramos rollizos, esten- didos y que parecen como algo nudosos, de corteza color ceniciento v con muchas grietas y estomas, centro del tronco y de los ramos coii médula abundante en los tiernos. Hojas. opuestas, con la base del raquis trabada en los ramos floríferos, imparipinadas y formadas de 4 pares de hojuelas opuestas, mas ó menos pe doladas, según su po- sición, ovales, aguzadas por ambos estremos y cuyo ápice se termi- na por una punta, con los bordes algo ondeados, aserrados por encima de la base, largas de 2-2 1 {'2'' sobre 1 1 [2-1" de ancho, del todo lampiñas y lustrosas superiormente ; la impar mayor y mas oval tiene el peciolo mas largo ; raquis acanalado y estriadito. Flo- res blanco-amarillentas en cértulos ó cimas terminales formadas de algunas cimas parciales, ordinariamente 5, cuyos últimos pedicelos se terminan por 3 flores pediceladas : una bracteita acompaña á la inserción délos brazos del cértulo. Cáliz pequeño de limbo 4, 5-lobo, con los segmentos ovales de bordes algo membranosos; su base está acompañada de dos bracteitas opuestas; corola enrodada 4, 5-íida, con las divisiones igualen, obtusas y algo convexas; estambres 5 y á veces 4 insertos en la base de la corola, con cuyos segmentos alter- nan, un poco mas cortos que ellos y enderezados, "con anteras casi mediifijas, de celdas diverj entes por la base, mientras la parte media está soldada á favor do la punta del filamento. Ovario oval cuyo ápice cónico y libre del cáliz lleva 3 estigmas formando una masa glandulosa verdusca y tríloba, Naculanio unilocular 3-espermo, liso, globoso, coronadito y prieto ó mejor morado oscuro, cuyos hueseci- tos arrugados y enderezados son pegados en el eje: samhuciís, F. 61, T, I, "735. Corola recargada y empizarrada ó torcida, 'ISG. — Corola de estivacion valvar, 739, . 136, Óvulos pendientes; embrión pequeño incluso en el endos- permo; corola recargada ó imbricada, *737. — - Óvulos pegados late- ralmente; embrión contenido en el endospermo; corola torcida, 738. 737. Arbustos sarmentosos cuyos tallos ramosísimos, delgados y largos salen de una raiz tortuosa bastante gruesa, con hojas simples, opuestas, cortamente pecioladas, lampiñas, enteras, elípticas ó ao- vado-lanceoladas, aovadas ó aovado-oblongas, con una punta obtusa ó sin ella y cortamente cuneiforme portábase; estípulas mucronadas de punta mas corta que su vaina ó subuladas, con la punta mas larga que la vaina, trabadas con los peciolos. Flores amarillento-blancaa 324 MÉTODO DICOTÓMICO. en cimas racemiformes, axilares y de cáliz adherente algo campa- nudo, de tubo aovado, 5-dentado y persistente, cujos dientes son iguales y deltoídeos; corola infundibuliforme, con 5 lóbulos iguales aovado-lanceolados ó lanceolados; estambres insertos en la base del tubo de la corola, algo monadelfos, de filamentos peludos, cujas an- teras son enteramente inclusas ó un poco esertas. Ovario globoso, algo comprimido, bilocular, cada celda monosperma, de cuyo ápice sale un estilo filiforme mucho mas largo que los estambres, termi- nándose por un estigma claviforme, con dos lóbulos pegados ó di- verjentes. Baya redondeadita, comprimida, blanca, casi dídima, coronada por las divisiones calizinales, con 2 ó 3 huesecitos ó pire- nas; semillas comprimidas, cuyo embrión axil está contenido en el endospermo cartilajinoso : chiococca, F. 62, Or. I, T. III, G. III. •738. Arbusto ó arbolito primoroso, de tronco recto, bastante ra- moso, que se eleva de 15' á.25' de altura, con hojas simples, opues- tas, cortamente pecioladas, enteras y como algo undulosas por la márjen, lampiñas, coriáceas, oblongas, algo aguzadas por los dos estremos, con unfí punta, largas de como 3"-4" y anchas de 1 1[2" á2", de cara superior lustrosa y de un hermoso color verde oscuro; estípulas subulado-lanceoladas,> solitarias y muy pronto caducas. Flores blancas, lindas y muy fragantes, en grupos axilares en los ramos del año anterior, cortamente pediceladas, cuyo pedúnculo común lleva en su apéndice de ordinario 3 flores, con el pedicelo corto provisto de dos bracteitas situadas por su base, y de cáliz tur- binado, de limbo con 5 dientes iguales, muy chiquitos y apenas mar- cados; corola hipocrateriforme, de tubo cilíndrico-infundibuliforme mucho mas largo que el cáliz, cuyo limbo torcido está partido en 4, 5 lóbulos estendidos, iguales y obiongo-lanceolados; estambres sa- lientes ó inclusos insertos hasta la parte mediana y un poco superior del tubo, alternando con las divisiones de la corola, cuyos filamen- tos cortos y derechos llevan anteras lineares, dor^ifijas y vacilan- tes. Ovario ovoideo 2-locular, con un huevecillo en cada celda, de cu^'o ápice sale un estilo simple, filiforme, mas largo que los estam- bres, terminándose en un estigma 2-fido. Baya cerasiforme lisa, lustrosa, ovoidea, 2-locular, con las semillas pegadas en la parte mediana del tabique y con un surco lonjitudinal por el medio de su cara interna llana, mientras la esterna es convexa, envueltas en una concha apergaminada; embrión recto de raicilla infera y con los cotiledones foliáceos; endospermo cartilajinoso: cofea, F. 62, Or. I, T. V. 739. Flores en cabezuelas y agrupadas sobre un receptáculo; fruto con ó sin pirenas, 740. — Flores nunca dispuestas en cabezue- las ni provistas de receptáculo tampoco: fruto siempre con pirenas 743. 740. Ovario bilocular; receptáculo involucrado y pajoso; baya con 2 pirenas ó huesecitos, 741. — Ovario 2 ó 4-locular; receptá- culo sin involucro, globoso y no pajoso ; baya con una semilla en cada celda, 742. 741. Arbustos, matas ó plantas herbáceas, con las ramitas nudo- silas, tetrágonas, sub-tetrágonas ó cilindricas entre los nudos , á VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPÉTALOS. 325 veces velludas y con mayor frecuencia lampiñas y que llevan hojas opuestas, simples, sentadas, subsesiles ó cortamente pecioladas, elípticas, eliptical-oblong'as, lanceolado-oblongas, con una punta mas ó menos obtusa ó aguzada, largas de 8"-6"-5"-4"-3" ; estípulas mas largas que su vaina, 2 de cada lado, lanceolado-subuladas y largamente subuladas ó axilares, redondeadas, obtusamente bílobas y abiertas, otras veces tan largas como su vaina, aovadas y bílobas, por fin vaina et-tipular troncada y abierta, á veces bífida, con algu- nas aristas tiesas v deciduas. Flores en cabezuelas solitarias, de ordinario terminales, pedunculadas ó subsesiles, alguna que otra vez axilares y sentadas, de involucro cuyos lóbulos son mucho mas largos que las flores, acorazonados ó aovados, puntiagudos ú obtu- sos, otras veces mas corto que las flores y -formado de brácteas ao- vado-redondeadas, cuadrado-oblongas y troncadas por el ápice ó redondeaditas; pajas del receptáculo redondeadas ó algo lobadas, cuadrado-oblongas y troncadas, y en fin obaovadas, laciniadas y pes- tañosas por el ápice; cáliz con limbo persistente, elongadito y dimi- nutamente 5-dentadito; corola hipocrateriforme y cayo limbo es li- jeramente reduplicado; estambres inclusos, insertos en eltubo de la corola y con anteras oblongas. Ovario ovoideo, 2-locular, con un huevecillo erguido en cada celda, de cuyo ápice sale un estilo ter- minándose por un estigma bífido. Baya, casi lisa, de endospermo y pirenas llanos ó lijeramente encorvado por las comisuras, otras veces pirenas, obtusamente 5-costilludas é insolutas por las comi- suras, cuyo endospermo es campilospermo ó siguiendo á la proyec- ción de las pirenas : cephcBlis, F. 62, Or. I, T. VII, S.-T. II, G. VI. 742. Arbusto ó mata de tallo cilindrico, muy ramoso y como nti- doso, alto de l'-l 1[2', arrastrándose por entre las raices de los de- mas vejetales, lampiño ó alampiñado, con hojas simples opuestas, cortamente pecioladas, lanceolado-oblongas, con una punta y largas de 3"-2"; estípulas subuladas, membranosas y obtusas. Flores blan- cas olorosas en cabezuelas solitarias, axilares ó terminales, pedun- culadas, pequeñas y mas largas que su corto pedúnculo, formadas de muchas flores , de cáliz adherente, de limbo corto, dentadito ó sub-enteio, con los lóbulos coherentes; corola infundibaliforme, de tubo cilindrico y á la vez un poco cónico, cuyo limbo está partido en 5, raras veces 4, 7 segmentos iguales y abiertos; estambres inser- tos en el tubo de la corola, inclusos y de filamentos cortísimos. Ovario de ordinario hexágono, bilocular, con un bolo óvulo erguido ó pegado por encima de la base en cada celda, de cuyo ápice sale un estilo simple bastante largo y eserto, terminándose en un estigma bíñdo. Baya globoso-hexágona mas ó menos angulo.-a ó comprimi- da, algo coronada, ancha de 4"'-6'" : morinda, F. 62, Or. I, T. VI, S.-T. II, G. VIL 743. Corola hipocrateriforme, segmentos del cáliz recorvados, estrechos y abiertos, 744. — Corola infundibuliíorme; cáliz denta- dito ó con segmentos, raras veces entero, 745. 744. Primorosa planta herbácea, vivaz, pequeña, de tallo filifor- me, rastrero y arraigante, mas ó menos ramoso, alampiñado, con hojas simples que salen opuestas de trecho en trecho y como á unas 326 MÉTODO DICOTOMICO. • 4" de distancia, y de la parte inferior del tallo correspondiente á su inserción nacen algunas raices que penetran en el suelo y mas tarde uno ó dos ramos, largamente pecioladas, acorazonadas, tan anchas como laTgas, redondeadas ú obtusitas por el ápice, con el seno basi- lar estreclio, de cara superior alampiñada, lustrosa y de color verde oscuro, mientras la inferior, mas pálida, es velluda y algo teñida de moradu&co, como de 1' 1|2" de largo sobre 3\4" á 1" de ancho; peciolo erguido largo de 1' 1" 1\2, morado, con la cara esterior con- vexa y lampiña, mientras la interna, plana, lleva en ambos lados una hilera de pelo blanco y glanduloso; de su ápice cuelga el limbo de tal manera, que el ápice toca casi al suelo; estípulas interpecio- lares bastante grandes, triangulares, cuya punta se desprende asaz pronto, quedándose la base membranosa ; de entre las dos hojas sale del tallo rastrero otro tallo derecho, alto como de 2", con 2 ó 4 ho- jas opuestas, de las cuales 2 están en su base y son caducas, mien- tras las del vértice persisten y de entre ellas sale un pedúnculo sim- Xjle, recto, largo como de 1|2" hasta 1", moradito, cuj'o ápice lleva de 2 á 6 flores que florean sucesivamente, pediceladas ó subsesiles, acompañadas de una especie de involucro formado por 3 brácteas foliáceas, linear-lanceoladas, aguzadas y casi tan largas como los pedicelos ó los cálices : flores preciosas y blancas, de cáliz adherente, cuyas divisiones lanceoladas, puntiagudas y de punta morada, son pubescentes y verduscas interiormente; corola hipccrateriforme un poco tubulada, cuyos 5 segmentos espesitos, aovado-lanceolados, iguales,, son pubescentes y un poco doblados hacia fuera, garganta peluda ; e¿tambrís inclusos é insertos en el tubo de la corola, que es dos veces mas largo que las divisiones del cáliz, con filamentos cortísimos; estilo simple, filiforme, mucho mas largo que los estam- bres, terminado por un estigma bífido, cuyos lóbulos battante largos, diverjentes, cilindricos y glandulosos son algo doblados hacia fuera, saliendo del ápice de un ovario bilocular, de celdas uniovuladas. Baya lisa, lustrosa y de un primoroso color encarnado, coronada por las divisiones calizinales verdes, aovada, conteniendo dos pire- nas ó huesecitos lijeramente angulosos, de cara interna un poco en espiral y llana, mientras la esterior es convexa v con 3 crestas lon- jitudmales : geopJdlla, F. 62, Or. I, T. VI, S.-T! II, G. VIII. 745. Corola infundibuliforme, de tubo corto a^ derecho, 746. — Corola también infundibuliforme y de tubo corto, pero oblicua, con frecuencia gibosa por la base ó con los segmentos desiguales, 747. 746. Arbustos mas ó menos grandes ó matas , ordinariamente lampiños y algunas veces velludos ó pubescentes, mas ó menos ra- mosos, de 2' ó 3' de alto hasta I2'-15' y aun 25'. Hojas simples, opuestas, obaovadas, elípticas, oblongas, lanceolado-oblongas, lan- ceolado-elípticas, aovado-oblongas, lanceoladas, eliptical-oblongas, espatulado-lanceoladas, aovado-lanceoladas, mas ó menos aguzadas ó con una punta, de ordinario cartáceas y algunas veces coriáceas, bastantes veces costilludas, mas ó menos pecioladas y largas de 15'- 10"-8"-6"-4"-3", ordinariamente lampiñas; estípulas solitarias in- terpeciolares de base trabada con los peciolos y -persistentes, mien- tras la paite libre es de ordinario decidua y otras veces persistente, VEJETALES HERMÁFKODITOS MOls^OPETALOS. ^Tfíi de tamaño jíiguramuj variados. Flores blancas, rojo-pálidas, color pajizo solo ó verdusco á la vez, amarillas, comunmente en panojas terminales ó á veces axilares ó en cimas terminales pedunculadas, acompañadas con frecuencia de bracteitas diminutas, y de cáliz adhe- rente, de limbo persistente y con 6, 4 dientecitos ó segmentos, raramente sub-entero ; corola infundibuliforme ó casi así, de. tubo corto y con 5, 4 lóbulos, con bastante frecuencia velluda en la gar- ganta ó por debajo de ella; estambres insertos en el tubo de la co- rola, tan pronto inclusos como esertos y de anteras oblongas. Ovario aovado, bilocular, con un solo óvulo erguido en cadn celda, y de cuyo ápice sale nn estilo filiforme terminado por un estigma bíñdo. Baya ovoidea ó globosa, carmesí, amarillenta ó roja," larga de 3"- 4"' y ancha de 2"'-S"\ con las pirenas sea comprimidas por el dorso, 3-crestadas, cuyas crestas laterales son contiguas por los ángulos de las comisuras, sea semi-rollizas, 5, 3-crestadas, con las crestas equidistantes, otras veces lisas é involutas por las comisuras, alguna vez provistas de un surco largo situado por la comisura y 5, 3-cres- tadas ó angulosas, y por último separadas la una de la otra en el eje, lijeramente encorvadas por la comisura, apenas 5-crestadas ó 5-agiizadas por el dorso ; endospermo cartilajinoso, llano, compri- mido y sin surcos, otras veces con surcos situados entre las crestas, plano, con dos surcos diminutos situados sobre el lado de la comi- sura ó campilospermo y siguiendo á la proyección de las pirenas, ó en fin sin surcos sobre el lado cóncavo ó llano de la comisura :^;^y- c/iotria, F. 62, Or. I, T. YI, S.-T. I, G. IV. 747. Arbustos lampiños, ramosos, de 3' á 10' de altura, de ramos nudosos y tetrágonos ó cilindricos entre los nudos: hojas simples, opuestas, enteras, pecioladas, eliptical-oblongas, aovadas, elípticas, lanceolado-oblongas, ovai-oblongas, con una punta, lampiñas por ambas caras ó algunas veces pubescentes ó alampiñadas por la infe- rior, membranosas; estípulas sea cortas, subuladas y tan largas como su vaina, sea diminutas" y sub-distintas ó de tamaño regular, mas largas que su vaina, lanceolado-lineares ó linear-aguzadas. Flores en panojas corimbiformes ó tirsoiformes, terminales, cuyos pedúnculos y brazos, ordinariamente bastante largos, son del, color de las flores, blancas, azafranadas ó rosadas, y de cáliz adherente, de limbo persistente, y con 5, 4 dientecitos ó segmentos, rara vez sub-entero ; corola infundibuliforme, tubulada, mucho mas larga que el cáliz, alampiñado-puiverulenta, con el tubo claviforme y cilin- drico, sub-cilíndrico y 'giboso por la base ó filiforme y claviforme á la par, con la garganta lampiña, de limbo 5-partido, con los seg- mentos aovados, oblongos y abiertos, oblongo-sub-agudos, iguales ó desiguales, ordinariamente mas cortos que el tubo, estambres inser- tos en el tubo, un poco esertos, pero algo mas cortos que las divi- siones del limbo ; estigma 2-fido; ovario 2-locular, con un solo óvu- lo erguido en cada celda. Baya con 2 pirenas 5-crestadas é involutas por la comisura ó llanas por la comisura y casi lisas; endospermo de ordinario campilotropo y siguiendo la proyección de las pirenas, raras veces ortbospermo : palicurea, F. 62, Or. I, T. YI; S.-T. I, G. V. 328 MÉTODO DICOTÓMICO. 748. Corola unilabiada; hojas alternas sin estípulas, 749. — Co- rola nunca labiada, enrodada y de segmentos recargativos; hojas opuestas j con estípulas interpeciolares; óvulos pendientes, 750. 749. Arbusto de las orillas del' mar, poco ramoso y que se eleva á 2' ó 3' de alto, cujo tallo de base tendida j de vértice derecho que llev.a 9, 12 hojas simples, alternas, obaovadas ó espatuladas, bien enteras, cuyo peciolo muy corto y blanco-amarillenio es un poco mas ancho por la base, con barbas en la axila, carnudas, dobles, quebradizas y cuyas nervaduras son representadas por estrías lije- ras visibles por ambas caras, lampiñas, lustrosas y un poco color verdemar, largas de 3"-4" y anchas de 2"-3". Flores en cimas axi- lares trifloras, cuyo pedicelo largo de como 2"-3'', simple, derecho, un poco comprimido y de vértice algo mas grueso, que lleva 4brác- teas, de las cuales 2 son laterales, mas largas j lanceoladas, con una puntita amarillenta y carnuda, cóncavas interiormente y con- vexas esteriormente, la del medio al contrario es muy corta, redon- deada y obtusa, la cuarta es rudimentaria, y de la axila de las dos laterales sale un pedicelo semejante al pedúnculo mas corto, mas delgado y unifloro; cáliz adherente, de limbo troncado y ondeado ó lijeramente dentadito; corola irregular largamente tubulada, hen- dida por el lado superior y representando los semi-ñósculos de las synantéreas, de manera que el limbo horizontal que forma el labio es5-lobado, con segmentos iguales, ovales, puntiagudos, cuyos bor- des están provistos en su cara superior de una membrana petaloí- dea, ondulosa, blanca y erguida, que no alcanza hasta el ápice, re- emplazado en la base por apéndices blancos, filiformes, que ocupan también la garganta y el tubo que son amarillentos; estambres in- clusos insertos entre la corola y la base del estilo, de los cuales uno sale por la hendidura, aveces hay uno rudimentario, son libres, con los filamentos tan largos como el estilo, de cara interna, llana y estriada, mientras la esterna es convexa, de ápice mas ancho, cuyos dos lados llevan cada uno una celda de la antera, y después de su inserción se termina en punta obtusa, y para que se efectué la fecundación tales anteras se aplican sobre la copita ó indusio que acompaña al estigma. Ovario adherente 2-locular, con un óvulo en cada celda, globoso y de cuyo ápice sale un estilo derecho, largo, blanco, con la base verdusca y velluda, cuya parte superior, arquea- da, sale por la hendidura, terminado por un estigma endusiado, verdusco, comprimido, glanduloso y lobado. La fecundación se ve- rifica en el botón antes de abrirse la flor. Fruto drupáceo sub- globoso, amarillo, con un hueso, y cada celda es monosperma : scce- vola, F. 58, T I. 750. Semillas sin endospermo, ordinariamente cilindricas, oper- culadas por el cordoncito dilatado; raicilla larga; cotiledones cortos; lóbulos de la corola ordinariamente imbricativos, 751. — Semillas con endospermo; embi'ion pequeño encerrado; lóbulos de la corola siempre imbricativos, 753. 751. Limbo calizinal 5-partido, persistente; corola enrodada, profundamente 5-partida, de segmentos lijeramente imbricativos; anteras subsesiles adheridas entre sí y casi libres del tubo de la co- VEJETALES HEEMAFRODITOS MOKOPÉTALOS. 32^ • roia, y formando una columna aovado-oblonga, membranácea por el ápice, algo mas corta que los segmentos de la corola; Chtilo bífido con los brazos contiguos; estípulas persistentes; hojas verticiladas por á 3, 752. — Limbo del cáliz troncaclo, iacerado-repando, repan- do ó lacerado j por último deciduo; corola hipocrateri forme con 6, 4 y á veces Glóbulos bien iml)ricativos, de tubo cilindrico lijera- mente encorvado v ancho, mas laigo que el cáliz, filiforme ó ciavi- forme, tomentoso, pubescente, velludo -tomentoso ; estípulas de or- dinario deciduas; hojas opuestas. Arboles bajitos, aveces de 20'-A.0' ó arbustos de 8' á 12' de altura; hojas simples, enteras, nías c me- nos pecioladas, cuyo capullo o venia está raras veces envuelto en una sustancia resinosa blanca, que se halla sobre los peciolos, ra- mitas y hojas, aovadas, acorazonadas ó sub-cordifoimes , elípticas, oblongo-elípticas, elíptico-redonditas ó lanceoladas, á veces festo- neadito-repandas, lampiñas del todo, alampiñadas ó de cara supe- rior lampiña, mientras la inferior es plateado-sedosa, tomentosa, pubescente, á veces solamente á lo largo de las nervaduras, de base acorazonada ú obtusa y con el ápice mas ó menos puntiagudo ú ob- tusito; con las venitas aproximado-reticuladas ó apenas marcadas; largas de 8-5", 3-6", 5^2", etc., sobre 5-3", 2-4, 3-1", etc. de an- cho; estípulas aovado-lanceoladas, deltoídeo-subuladas, alesnadas, lanceoladas ó aguzadas, raras veces persistentes. Flores pequeñas blancas sentadas en la cara interior de los brazos especiformes ó contraidos, frecuentemente unilaterales, ó una entre ellos mas ó menos diverjentes ; anteras lineares subsesiles por debajo de la gar- ganta de la corola, enteramente inclusas y raras veces sub-inclusas; estigm.a cabezudo. Drupa globosa ó cortamente oblonga, con ángu- los agudos o sin ellos, tomentoso-venosa, pubescentita y lijeramente asperita, aterciopelada, alampiñada, asperita ó lisa _y ancha de 3-2"', con 6, 3 y á veces 9 celdillas : guettarda, Aquilón, F. 62, Or. I, T. II. 752. Arbusto alto de 2'-3', ramoso y con muchas hojas simples, subsentadas, espesitas y lineares, revueltas por la márjen, pubes- centitas, deciduas y largas de 4"'-8"'. Flores blanquecinas, pubes- centes, en grupos axilares y acompañadas de brácteas: cáliz adhe- rente, con el tubo aovado y el limbo 5-partido y persistente ; corola enrodada, profundamente 5-partida, con segmentos oblongo-lanceo- lados, blanca y pequeña. Anteras^ subsesiles. Drupa elipsoídea 2, 1- locular, conteniendo semillas ovoídeo-oblongas, colgantes y opercu- ladas por un arilo basilar : strumpjia, F. 62, Or. I, T. II. 753. Arbustos resinosos ó arbolitos bajitos, lampiños, ramosos y altos de 2'-3' hasta 8'-15', con hojas simples opuestas, enteras, cor- tamente pecioladas, coriáceas, obaovadas, espatulado-lanceoladas, elíptico-lanceoladas ó solamente lanceoladas, obtusas ú ol)tusitas, aguzadas por los dos estremos, lustrosas, largas de4"-3"-2"; estí- pulas persistentes, apiculadas, de vaina trabada entre los peciolos. Flores blancas en cimas pedunculadas, axilares o Cbtraxilares, tri- cótomo-fastijiadas, cáliz adherente, de tubo aovado, con el limbo corto, sub-troncado, ondulóse ó con 5 dientecitos dcltoídeos, persis- tente ; corola enrodada, profundamente 5-fida con los segmentos 330 MÉTODO DICOTÓMICO. oLlongo-lineares ó lanceo! aáo-o"blongx)s y aovado-lanceolados; es- tambres 5 ó 10 esertos. Drupa globosa, asurcada, con 5, 10, 20 pi- renas comprimidas, así como las semillas que contienen; embrión situado en el ápice de un endospermo carnudo: eritJialis , V . 62, Or. I, T. III, G. 11. 1d4. Elores compuestas ó agrupadas en número ma_yor ó menor sobre un receptáculo común de forma muy variada, "755. 755. De ovario libre ó supero; flores siempre monoicas, 756. — De ovario adlierente ó infero ; flores ordinariamente hermafroditas, 759. 756. Arboles de suco lechoso, 757. — Plantas herbáceas 6 matas de savia nunca lechosa, 758. 757. Mas ó menos grandes, con hojas simples, coriáceas, de flo- res muy pequeñas, incompletas y contenidas en el interior de un involucro mas ó menos desarrollado, piriforme, casi cerrado por el ápice, V situadas en su pared interna; 3 estambres solamente :Jicus, 111. 758. Yerba de cuyo rizoma salen las hojas y los pedúnculos flo- rales mas ó menos cortos, simples y terminados por un receptáculo llano mas ó menos cuadrilátero , sin involucro y cuya parte plana lleva muchas flores muy pequeñas incompletas, situadas en sus al- véolos. Fruto capsular: dorstenia, 167. 759. Estambres libres; hojas simples opuestas, con estípulas in- terpeciolares; fruto abayado ó capsular, 760. — Estambres 5, solda- dos por las anteras; hojas compuestas, alternas, sin estípulas, raras veces simples y opuestas; un aquenio, 763. 760. Estambres 4; fruto capsular, 761. — Estambres 5; fruto abayado, 762. 761. Flores amarillentas en cabezuelas, largamente peduncula- das, axilares ó terminales, sésiles, en un receptáculo esférico, 695. 762. Receptáculo involucrado y pajoso; cáliz de limbo persistente con 5, 4 dientes pequeños ó segmentos, raramente sub-entero; co- rola infundibuli forme ó casi así y de tubo corto, lóbulos 5, 4 valva- dos. Baya con 2, 3 pirenas, mas veces asurcadas y 3, 5-crestadas, 742. — Receptáculo ni involucrado ni pajoso tampoco ; limbo cali- zinal corto, dentadito ó sub-entero; tubos calizinales concretos; corola infundibuliforme, de limbo con 5, 4, 7 lóbulos. Baya conte- niendo una semilla en cada celda y no pirenas, 741. 763. Corola tubulada ó ligulada, pero solamente en las florecitas de los radios, 771. — Corola nunca tubulada, pero sí bilabiada ó li- gulada, 764. 764. Corolas bilabiadas ó liguladas, pero solo en las florecitas de los radios, 765. — Corolas todas liguladas ó flores homógamas, 766. 765. Plantas herbáceas anuales, con todas las hojas radicales y arrosetadas, simples, pero mas ó menos lobadas, de manera que las unas son liradas, con el segmento terminal grande y aovado-oblon- go ó lirato-espatuladas, con el segmento terminal contraido en la última sinuosidad, otras veces espatuladasó espatulado-lanceoladas, aguzadas por la base, enteras y regularmente sinuosas por arriba ó puntiagudas, con algunos dientecitos distantes ó enteras, de cara \EJETALES HEJa.MAFBODITOS MOKOPÉTA1.OS. 331 inferior blanco-tomentosa. Del medio de La roseta sale un pedúnculo largo de 6'' á 10", que se termina por una cabezuela solitaria lieteró- gama; radios apenas esertos, con ñores blancas ó purpurinas, cuyas ñores femeninas son dispuestas en algunas series, las esteriores li- guladas, mientras las del centro son bisexuales ó liermafroditas; in- volucro lijeramente imbricado, con pocas series de escarnías lanceo- lado-lineares Y aguzadas ó cortas, otras veces lineares j aguzadas; receptáculo desnudo; anteras coludas; brazos del estilo pubescenti- t€s ; aquenio sub-comprimido, con las caras costilludas, cuyo ápice se aguza en pico ñliforme 2 ó 3 veces mas largo, tan largo ó mas corto que él, con un penacho peludo y ordinariamente color pajizo teíiido de purpuráceo ; leria, F. 59, T. III. 766. Semillas de penacho sentado, 767. — Semillas de penacho subsesil ó pediceladito, 770. 767. Flores amarillas, 768. — Flores azules, 769. 768. Plantas herbáceas anuales mas ó menos ramosas, de tallo derecho, con frecuencia estriado, pubescentes ó alampiñadas, lam- piñas ó velludas, de savia lechosa; hojas simples, alternas, sentadas, mas ó menos laciniadas ó partidas, runcinado ó sub-entero-denta- das. Flores ó mejor cabezuelas, dispuestas en corimbos, sin glándu- las, con involucro imbricado, algo ventrudo por la base y formado de hojuelas estrechas; receptáculo desnudo; aquenio cilindrico, es- triado, transversalmente rugoso ó liso, troncado por el ápice, que lleva un penacho blanco con pelos simples : soncJius, F. 59, T. I. 769. Plantas herbáceas bisanuales, de tallo en zig-zag, derecho, estriado y velludo, de 2' á 3' de alto, poco ramoso, con hojas alter- nas, simples, sentadas, runcinadas y á veces laciniadas, las radica- les un poco pecioladas. Flores algunas veces blancas, cuyas cabe- zuelas , dispuestas en especies de espigas están en el ángulo saliente formado por el zig-zag del tallo, con involucro doble ó formado de uno esterior compuesto de 5 hojuelas algo dobladas hacia fuera y mas cortitas, y otro interno con 8 hojuelas soldadas entre sí por la base, erguidas y mucho mas largas; receptáculo alveolado y pajoso, plano; aquenio troncado, coronado por muchos dientecitos : chico- Hum, F. 59, T. I. 770. Plantas herbáceas anuales, también de savia lechosa, cuyo tallo derecho se eleva hasta 3' de alto, de ordinario no ramoso, con hojas simples , alternas, sentadas, cuyas radicales algo pecioladas son grandes, oval-redond.eadas, algo cóncavas y ondulosas, enteras, lampiñas, á veces manchadas de moradusco, otras veces dentadas ó enteras, cuyas inferiores, de ordinario roncinadas, tienen algunos lóbulos puntiagudos ó lanceolado-oblongos, un poco abrazadoras por la base aguzada, superiores, lanceoladas, aguzadas y setiles; cabe- zuelas en cimas ó panojas grandes abiertas, con los brazos racemi- formes; involucro imbricado, cilindrico, cuyas hojuelas en pocas series son algo membranotas por los bordes; receptáculo desnudo, plano, punteado, con 12 á 15 ñores; aqi¿enio comprimido, ovoideo, blanco ó prieto, liso ó estriado, abruptamente picudo y coronado por un penacho simple y estipitado : lactuca, F. 59, T. I. 771. Sin receptáculo lejítimo, bien que á primera vista parezca 332 MÉTODO DTCOTÓMICO. existir; involucro taiso lorniado por las dos hojas mas superiores; florecitas saliendo de la axila de una bráctea escamiforme; estilo simple terminado por un estigma obtuso; aquenio liso, lustroso, desnudo y como ombligado por el ápice, *772. — Receptáculo lejíti- nio, acompañado de un involucro formado de un número variado de iiojitas escamiformes mas ó menos desarrolladas, mas ó menos fo- liáceas; flósculos ó íioroues j semi-flósculos pegados en un receptá- culo de forma y tamaño muy variados, desnudo ó pajoso, peludo ó pubescente, plano ó convexo, liso ó alveolado; estilo siempre bífido; a([uenio ordinariamente coronado, 773. "772. Del ápice de una raíz perpendicular, vivaz, bastante gruesa, mas ó menos ramosa, y de entre los restos de los tallos del año an- terior salen tallos derechos, delgados, en número variable, bastante resistentes, pero no leñosos propiamente dicho, lampiños, de color que varia del rojizo al verdoso pálido y al gris pálido por la ba^e, que es cilindrica, mientras que no tardan en volverse comprimidos y algo estriados á lo largo de las caras llanas y no por las convexas, y de sección elíptica; se ramifican por á tres, como á 6" del suelo, cuya .división central, que es la continuación del tallo, no tarda en morirse y en desaparecer, mientras que las dos laterales salen opuestas de la axila de dos hojas correspondientes y de una especie de nudo crecido ó comprimido: siguen así bástala altura de 8" á 10" y vuelven á ramificarse de igual modo, haciéndolo dos ó tres veces mas, de tal suerte que la parte superior del tallo se encuentra bas- tante ramosa; siempre la división del medio, cuando existe, es mu- cho mas corta que las laterales, pues que no alcanza sino á 3" ó 4" de largo, tei;minándose por un grupo de flores. Hojas simples, opuestas, como connadas ó trabadas por la base, sentadas, lanceo- ladas, coriáceas, de base redonda y aguzado-puntiagudas por el vér- tice, enteras y algo membranosas por los bordes apergaminados y ondulosos, lampiñas por ambas caras, cuya superior, de un hermoso color verde pálido, es lu&trosa, mientras la inferior, mas pálida y no lustrosa, tiene las nervaduras y venas, muy pronunciadas, largas como de 3"-4" y anchas como de 1"-1 1|2", basinervias; la costilla va acompañada de dos nervaduras principales, saliendo una de cada lado, paralelas á ella, las cuales á su vez están acompañadas de ve- nas afectando igual disposición, las cuales se anastomosan con veni- tas, sin seguir entonces simetría alguna; las nervaduras son un poco visibles por la cara superior, cuyas dos mitades se doblan algo hacia arriba y á lo largo de la costilla, de manera que se vuelve cóncava y con figura de barca ó curiaza. Flores blanquecinas terminales dis- puestas en grupos algo globosos ó en cabezuelas algo comprimidas, en número de 3 en el ápice de cada ramita o pedúnculo, cuya dispo- sición tricótoma afecta también, cortamente pediceladas y formadas de muchas florecitas saliendo de entre dos escamas grandes , cónca- vas y opuestas, cuyo ápice se va apartando un poco : están conteni- das en una especie de involucro falso formado por las dos hojas mas superiores. Cada florecita blanca, con el centro morado, sale de la axila de una escama espatuliforme cóncava por la cara interna que corresponde al flósculo y casi acucharada, con una puntita en el YEJ EXALES HERMAFRODITOS MONOPÉTALOS. 333 ápice y algunos pelos blancos por sus bordes y hacia su parte supe- rior escariosita. mientras la cara esterior cohyexa, blanco-verdus- ca, con 5 estrías yerdosas paralelas, cuya mediana alcanza la pun- tita, mientras las laterales siguen por par paralelo á lo largo de la escama. No hay receptáculo lejítirao, sino solamente su simulacro; en efecto, después de desprendidos los florones y de caldas las se- millas, se quedan en el ápice de las ramitas 5 á 6 alvéolas, que no son otra cosa sino el ápice de los pedúnculos que sostenían los gru- pos florales ó cabezuelas en ig'ual número y provisto de una especie de involucro monófllo y trílobo simulando una salvilla. Corola in- fundibuliforme tubulada, blanco-verdusca inferiormente , de limljo con 5 divisiones profundas, oval-puntiagudas y blancas; estambres 5, reunidos por las anteras morado-oscuras y un poco esertas, y al- ternando con los segmentos de la corola. Ovario pequeño, inverso- piriforme, pegado con la corola, unilocular, uniovulado y de cuyo ápice sale un estilo flliforme cuya parte superior saliendo por el ápice del tubo formado por las anteras es peluda y se termina por un estigma obtuso. El fruto es una especie de aquenio negrusco, liso y lustroso, i n verso-piriforme, enteramente desnudo y de ápice om- bligado. Las hojas y tallos estrujados entre los dedos exhalan un olor algo aromático particular y característico que nos ha parecido análogo al del androsemo oficinal de Europa: jarilla, Nobis: ichthyo- tlier'e, Mart.; ichthyothere curvifolia, F. 59, T. II, S.-T. YI. ^^74. Brazos del estilo ordinariamente largos y subulados, casual- mente cortos y obtusos, con la cara esterior enteramente pelieriza- da, 805. — Brazos del estilo nunca subulados, pero sí lineares ó cla- viformes, 11b. 775. Siempre mas ó menos lineares, 781. — Nunca lineares, pero sí claviíbrmes y de cara esterior papilosa, 776. 776. Cabezuelas ó calátides discoideas, compuestas de flósculos en número de 8, 12 y hasta 25, y raras veces de 4; involucro im- bricado 2, 1-seriado; receptáculo desnudo, ordinariamente lampiño: corola claviforme ó campanuda, 777. — Cabezuelas discoideas con 3á 5 florones nada mas, 778. 777. Arbustos, matas ó plantas herbáceas, algunas yeces como sarmentosos, muy ramosos, pubescentes, velludos y alampiñados : hojas ordinariamente opuestas y raras yeces alternas, simples, en- teras ó mas ó menos lobadas, laciniadas ó dentadas, pecioladas ó subsesiles, aovadas ó aovado-lanceoladas, elíptico-oblongas ó lan- ceolado-oblongas , aovado-redondeaditas ó deltoídeas, lanceolado- lineares, acorazonadas ó acorazonado-aovadas, oblongo-lanceoladas, romboídeo-aovadas, deltoídeo -aovadas, mas ó menos aguzadas, puntiagudas ú obtusas, aserradas ó sub-enteras, con frecuencia 3- nervias, pubescentes, yelludas, alampiñadas ó lampiñas. Flores en cabezuelas, cuyo involucro cilindrico es formado de algunas series de escamas apretadas}' alampiñadas ó también cilindricas, y por fin turbinado, pluriseriado, con escamas abiertas ó desparramadas por el ápice, alampiñadas, otras veces abierto también, 1, 3-seriado y con frecuencia provisto de escamas esteriores mas cortas, las esca- mas de la principal serie siendo sub-iguales; receptáculo forman- 334 MÉTODO DICOTÓMICO. do un cilindro corto que se eleva entre las escamas del involucro y aparece convexo ó llano por encima de ellas, ó un poco dilatado en- tre las escamas del involucro y de ápice llano que aparece por enci- ma de ellas, otras veces es deprimido ó diminuto por encima de las escamas del involucro y por fin deprimido y de ordinario diminuto. Aquenios 5, S-j^onoís, con un penacho peludo : eiípatorium, F. 59, T. II, S.-T. IV. G. III. 718. Cabezuelas con 3, 5 ñósculos, de involucro imbricado ; re- ceptáculo diminuto y convexo ; corola claviforme; aquenio corta- mente estipitado, 5-gono, aquillado por los ángulos, 179. — Cabe- zuelas ordinariamente con 4 florones; involucro 1 -seriado, formado de 4 hojuelas ó con una bráctea accesoria; receptáculo diminuto y desnudo; estilo provisto de un crecido lampiño y discoideo situado por la base; aquenios 5-gonos y sentados, 780. 779. Arbustos muy ramosos, lampiños ó pubescentes, que se ele- van de 6' hasta 16' de altura, con hojas opuestas, simples, aserra- das, lanceoladas ó elíptico-lanceoladas, aovadas, elípticas, aovado- lanceoládas, abruzadas por ambos estreñios, puntiagudas ó abruzadas, lare-as de 6"-8"-4"-3"-7" v anchas de 4"-2"-r'-6'"-18'", cabezuelas en grupos sentados ó subsesiles y dispuestas en corimbos compues- tos terminales, cuyas flores son blancas ó blanquecinas; involucro 4, 3-seriado, con escamas estriadas ó sub-estriadas, obtusas, las in- teriores oblongas y las del medio gradual ó bruscamente mas cortas y aovadas, mientras las esteriores son muy cortas. Aquenios peli- erizaditos ó alampiñados : crUonia, F. 59, T. II, S.-T. lY, G. IV. 780. Arbustos ó matas abejucados, de tallos delgados, muy ra- mosos y muy largos, con hojas opuestas, pecioladas, simples, lam- piñas, alam pinadas ó pubescentes, alabardado-deltoídeas, aovadas, elíptico-oblongas, ovales, oval-redondeaditas , aovado-lanceoladas, acorazonadas ó sub-cordiformes, bien enteras, sub-enteras, denta- das, dentaditas. sub-sinuado-repandas ó repando-enteras; aguzadas, puntiagudas, obtusitas ú obtusas, de cara superior mas ó menos lus- trosa, mientras la inferior es alampiñada ó pubescente; mas ó me- nos pecioladas; 3-nervias, triplinervias, quintuplinervias, 1-ner- vias, 5-nervias 3, 5-nervias, con las nervaduras mas ó menos pro- nunciadas, membranáceas ó coriáceas, largas de 3"-4"-5"-2''-21i2". Cabezuelas en espigas ó racimos compuestos y alargados, en corim- bos racémosos conos ó en corimbos ramosos y terminales, en fin pe- diceladas ó la del centro sola sentada, con ó sin bracteitas por la base del involucro, cuyas escamas son oblongas, oblongo-lineares, espatulado-lanceoladas, elíptico-oblongas, obtusas, obtusitas, pun- tiagudas ó mucronadas, lisas, estriadas ó sub-estriadas, lampiñas, alampiñadas ó pubescentes. Flósculos de corola con el limbo 5-fido,á veces mas corto que el tubo, como infundibuliforme, sub-claviforme ó campanuda. Aquenios ordinariamente lampiños, algo pubescentes ó glandulosos : miliania, F. 59, T. II, S.-T. IV, G. V. 781. Continuándose lineares hasta el vértice sin volverse planos, con apéndices cubiertos de pelo esteriormente, 782. — Estilo per- fectamente cilindrico, con los brazos lineares troncados por el ver- VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPÉTALOS. 335 tice, adornado de un grupo de pelos, después del cual se prolonga en un cono ó apéndice, 183. 782. Matas ó plantas herbáceas olorosas, cuyo tallo derecho j ra- moso se eleva á como 3'-4' y hasta 6' de altura, de ramos herrum- broso-pubescen,tes ó tomentosos, con hojas simples, alternas, pecio- ladas, oblongas ó elíp tico-oblongas, oblongo-lanceoladas ó lanceo- ladas, bien enteras ó dentaditas, repandas, glanduloso-pubescentitas superiormente y blanqueclno-pubescentes ó tomentosas inferior- mente ó desigualmente aserradas, repandas, suavemente pubescen- tito-sub-tomentosas ó alampiñadas; cabezuelas purpúreas, corimbo- sas, pediceladas y hemisféricas ó sub-globosas, con el involucro imbricado, de escamas aovadas ó aovado-oblongas, obtusitas y to- mentosas: las de la serie interior oblongo-lineares, aguzadas y esca- riosas ó herrumbroso-pubescentes y abiertas; las de la serie esterior aovadas, obtusitas, gradualmente pasando alas de la interior, aova- do-lanceoladas y puntiagudas. Flores esteriores de las cabezuelas discoideas, femeninas, dispuestas en algunas series y sub-troncado- filiformes, mientras las del centro, masculinas, campanudas, tienen el estilo sub-entero ; anteras coludas ; receptáculo desnudo. Aquenios sub-cilíndricos, con vilano peludo : flucliea, F. 59, T. II, S.-T. II, G. II. 783. Flores todas unisexuales, sea dioicas ó monoicas, heterocé- falas; receptáculo con mas frecuencia paleáceo; anteras sin cola; vilano nunca peludo; pelos colectores de los estigmas faltando con bastante frecuencia, 784. — Flores nunca jamas unisexuales y flo- res del disco hermafroditas, 785. 784. Planta herbácea anual, de tallo ramoso superiormente, alto de 1 1{2' á 3', pelierizadito, con hojas alternas, bipinatipartidas, cuyas superiores son enteras, simples y bastante grandes. Cabe- zuelas dispuestas en corim.bos ó panojas abiertas, pequeñas y sola- mente de 1 1];2"^ á 2"' de diámetro, blancas, heterógamas, con 5 florecitas femeninas situadas esteriormente , diminutas y ancha- mente liguladas, mientras las interiores, mucho mas numerosas y flosculosas, son masculinas; involucro 2-seriado ; anteras pálidas; estilo simple y pubescente; receptáculo pajoso, de pajitas dilatadas por el vértice, mellizas, contra los aquenios comprimidos, cuyo vilano sale de dos escamas ó es apenas notable : fdrtlienium, F. 59, T. II, S.-T. YI. 785. Aquenios siempre con vilano y nunca desnudos; 786. — Aquenios desnudos, coronados ó aristados, 794. 786. Vilano peludo ó formado de escamas solamente, 787. — Vi- lano peludo ó formado de escamas indistintamente; receptáculo desnudo, 793. 787. Vilano peludo, 788. — Vilano formado de escamas distintas, 791. 788. Cabezuelas homógamas ó heterógamas discoideas, rarísimas veces radiadas, aveces unifloras; anteras coludas; aquenios con vi- lano peludo ó cerdoso, raramente calvos; estilo de las flores her- mafroditas de brazos troncados sin apéndices, pero con un pincelito de pelo; el de las masculinas frecuentemente indiviso; de corolas, tu- 336 MÉTODO DICOTÓMICO. bulosas,5-dentadas, mientras las de las liermafroditas son filiformes y rarísimas veces liguladas, 789, — Cabezuelas homógamas y mas veces hetei ózamas, radiadas ó no, con las ñores del disco herma- froditas, lígulas con frecuencia uniseriadas ; anteras no coludas; receptáculo paleáceo; estigmas recorvados y terminados por un es- típite calloíO ; vilano uniseriado con cerdas tiesas, ásperas y persis- tentes, 790. 789. Plantas herbáceas anuales ó matas blanco-tomento.sas; muy ramosas y altas de 1 lf2' á 3', con hojas simples, sentadas, alternas, linear-lanceoladas, sub-enteras, aguzadas por ambos estreñios, to- mentosas por ambas caras y blancas interiormente ó lanceoladas, cortamente aguzadas, desigualmente festoneadas, de cara superior áspera y verde, mientras la inferior es blanco-tomentosa, y por úl- timo espatulado-lanceolada, las mas inferiores espatuladas sola- mente, de cara inferior blanco-tomentosa, con pelito muy apretado, anchas de l"-2" . Cabezuelas heterógamas en grupos terminales aco- rimbado-apanojados, escamas del involucro blancas, aovadas ú oblongas, obtusitas ú obtusas: flores femeninas 20, 30, hermafrodi- tas algunas ó en grupos dispuestos en corimbos arramilletados, con las escamas del involucro blanco-pajizo, aovadas ó aovado-oblongas, obtusitas ú obtusas; flores femeninas 50, 60, hermafroditas 7, 8 so- lamente, en fin en espigas, con los grupos inferiores de ordinario cortamente pedunculados y distantes; involucro formado de pocas series de escamas, cuyas interiores oblongas, puntiagudas ú obtusi- tas son parduscas ó blanquecinas. Aquenios sub-comprimidos ó ci- lindricos, á veces lijeramente ásperos : gnaphalium , F. 59, T. II, S.-T. VIL 790. Arbustito ó mata de tallo muy ramoso, pubescente, que se eleva de 4' á 7' ó algo mas de altura, asperita , con hojas simples, alternas, aguzadas por la base, muy variables, oblongo-lanceoladas ó aovado- lanceoladas, cuneiformes por debajo de los lóbulos, aserra- das ó trífidas, pubescentes y de cara inferior escabrosa ó tomentosa, un poco cartáceas. Cabezuelas amarillas dispuestas en corimbos apa- nojados, discoideas y homógamas; involucro imbricado, cuyas esca- mas interiores son coloridas; receptáculo algo plano y pajoso ; bra- zos del estilo cónicos por el ápice. Aquenio rollizo, cortamente estipitado, cuvo vilano peludo es áspero : neurolmna, F. 59, T. II, S.-T. VIII. 791. Todos los aquenios conformes, lampiños ó pubescentes, 792. — Aquenios no conformes, de tal suerte que los del disco, ob-com- primidos, están encerrados entre las escamas interiores y las pajitas esteriores, mientras los de la circunferencia son sub-trígonos, todos de base aguzadita ó adelgazada, sub-pubescentes. Sub-arbusto de como 6' de altura y muy ramoso, de hojas simples, cortamente pe- cioladas, esparcidas ó espiralmente alternas, aovado-lanceoladas, acuñadas por la base y aguzadas por el ápice, aserraditas, peniner- vias y pelierizaditas. Flores amarillas en grupos poco fornidos, cuyos pedúnculos, saliendo de la dicotomía, llevan una sola cabezuela sin brácteas, sub-globosa, conel involucro lampiño y formando panojas flojas, cuyas cabezuelas heteró£-amas tienen el involucro hemisférico VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPETALOS. 331 con 5 brácteas dispuestas espiralraente y en 2 series, ovales y mu- cronaditas; receptáculo convexo con pajitas ó paleas membranosas muy angostas, cuyas esteriores son mayores. Flores radiadas con pocas lígulas ó semi-florones en una serie única, escondidas entre las escamas del involucro y las pajitas derechas esternas y mayores del receptáculo. Florones del disco tubuloso-5-dentados; estilo corto incluso. Vilano de los aquenios formado de paleas variadas; en efec- to, las de la circunferencia son cerdosas y pequeñas, mientras las 5 del disco, ovales, derechas, aserrado-pestañosas y agudas son 3 ve- ces mas largas que la corola : vargasia, F. 59, T. II, S.-T. X. 792. Plantas herbáceas ó matas mas ó menos ramosas, pubescen- tes ó alampiñadas, con hojas opuestas, simples, escabroso-pubes- centes, triplinervias, pecioladas , aovadas ó aovado-lanceoladas, puntiagudas ó aguzadas, aserradas ó sub-aserradas, enteras ó sub- enteras, de cara superior escabroso-pubescente, mientras la inferior es pubescente ó alampiñada ,y glandulosa, redondeadas ó cuneifor- mes por la base, largas de 2"-3"-l". Cabezuelas discoideas ó radia- das, con los radios femeninos, dispuestas en corimbos terminales ó axilares, con flores purpúreas ó amarillas; involucro imbricado, con las escamas aovadas ó aovado-oblongas y obtusas ú oblongo-lanceo- ladas, aguzadas y obtusas por el ápice ; lóbulos de la corola sin ve- nas entre las nervaduras marjinales; brazos del estilo sub-troncados ó con un apéndice cónico diminuto. Receptáculo cónico y pajoso. Aquenios lampiños ó pubescentes, lijeramente angulosos; penacho formado de 20, 10, 5 escamas cerdosas, uninervias, pinatífido-es- triadasy aserraditas : calea, F. 59, T. II, S.-T. X. 793. Planta herbácea, lampiña y verde mar, de tallo derecho muy ramoso superiormente, tieso y que se eleva á 2'-3' y hasta 4': todas sus partes exhalan un olor fuerte muy desagradable, debido á la presencia de una esencia contenida en las muchísimas glandulitas transparentes que se "ven en sus hojas y demás órganos. Hojas sim- ples, ordinariamente alternas, glaucas, largamente pecioladas, oblgngo-lanceoladas ú oblongas, puntiagudas ú obtusitas, festonea- das ó enteras, largas de 1 1[2'', sin el peciolo que lo es otro tanto, y anchas de 1". Cabezuelas cilíndrico-cónicas, largas de 10 á 12'" y anchas de 4" largamente pedunculadas, purpúreas y formando como una cima terminal abierta ó floja; involucro uniseriado con descamas oblongo-lineares, valvadas, al principio cóncavas y por fin distintas, membranosas por los bordes y de ápice calloso ; brazos del estigma con apéndices pelierizaditos. Aquenio elongado, aguzado superior- mente, linear, comprimido y pelierizadito; penacho peludo y for- mado de pelo suave \ foro^lúllum, F. 59, T. II, S.-T. IX. 794. Disco las mas veces hermafrodito ; receptáculo peludo ; aquenio desnudo ; hojas alternas, 797. — Disco siempre hermafro- dito; receptáculo paleáceo; aquenios coronados; hojas de ordinario opuestas, 795. 795. Cabezuelas radiadas ó discoideas, 796, — Siempre mas ó menos radiadas y nunca discoideas, 800. 796. Radiadas ó discoideas, con las flores de los radios estériles; involucro 2-seriado; receptáculo Uanito; aquenio de pajitas deciduas TOMO I 2?. 338 MÉTODO DICOTOMICO. cuando se desprende, ^OS. — Discoideas ó cortamente radiadas, con las flores de los radios femeninas; involucro 1, 2-seriado; receptá- culo cilindrico ó cónico: aquenios del disco comprimidos, frecuente- mente con laraárjen pestañuda, mientras los de los radios son com- primido-angulosos, todos desnudos ó coronados por 2, 3, 1 aristas ó cerdas, 799. 797. Plantas herbáceas ó matas bisanuales, sub-leñosas ó perenia- les, detallo derecho, ramosísimo, pubescente-blanquecino, alto de 3' á 4'; hojas alternas cuyas radicales bi ó tripinatisectas, con los lóbulos algo obtusos, mientras las caulinares v ramales son pinatí- fidas; con las divisiones mas ó menos largas y lanceoladas, peciola- das todas, las florales al contrario sentadas, son mucho mas peque- ñas; todas tienen la cara inferior pubescente, blanquecina, y la superior lampiña y verde. Calátides globosas ó sub-globosas, hete- rógamas, pendientes y pedunculadas, en espigas simples y axilares, cuya reunión forma panojas bastante grandes, flojas y piramidales; involucro imbricado de hojuelas obtusas, pubescentes, con la már- jen membranosa; flores de la circunferencia ó de los radios femeni- nas, mientras las del disco son hermafroditas y todas fértiles , aque- nio obaovado : ahsinthmm, F. 59, T. II, S.-T. antemídeas. 798. Plantas herbáceas, lampiñas ó alampiñadas, con tallo dere- cho y tetrágono ó cilindrico y trepador; hojas opuestas, simples, aserradas ó mas ó menos profundamente partidas, pinatisectas, 1, 3- yugas, rarísimas veces enteras, de segmentos aovado-lanceolados ó aovados, oblongo-lanceolados ó cuneiforme-oblongos y lanceolados, aguzados. Cabezuelas dispuestas en corimbos ó largamente pedun- culadas; flores de la circunferencia ó radios estériles, blancas ó ama- rillas; involucro 2-seriado, con las escamas de la serie esterior apretadas, lanceoladas y pestañudas ó -pubescentitas, ó abiertas, li- neares y desparramadas. Brazos agudos ; receptáculo algo llano y pajoso; aquenios comprimidos ó tetrágonos, lampiños ó pelierizadi- tos superiormente, 2, 4-aristados, de aristas diverjentes esterior- mente, erguidas y mas largas por el centro : bidens, F. 59, T. II, S.-T. XI. 799. Yerbas anuales ó vivaces, de tallos desparramados, mem- breados ó enderezados desde la base arraigante, alampiñadas ó es- cabroso-pwbescentitas, con hojas opuestas, simples, pecioladas ó subsesiles, aovado-lanceoladas, lanceoladas ó aovadas, festoneado- repandas, triplinervias, contraidas ó aguzadas por la base, otras veces lanceoladas ó lineares, bien enteras, aguzadas hacia la base. Cabezuelas largamente pedunculadas, solitarias ó casi así, ovoideas y por ñn cónicas, radiadas ó cónico-discoideas y raras veces radia-' das sub-globo-as, y por último oblicuamente cónicas y discoideas; involucro de 5, 6 escamas ó con 5 solamente, otras veces cuvas es- camas 6, 7 son dispuestas en dos series ; receptáculo cilindrico ó co- nico-cilíndrico : S2)ilanthes, F. 59, T. II, S.-T. XI, G. I. 800. Muy cortamente radiadas; flores de los radios femeninas é inclusas; corola de los florones del disco 4-dentadas, 801. — Radios mas ó menos cortos y femeninos, pero nunca inclusos ; corola de los flósculos del disco 5-dentada, 802. VEJETALES HERMAFRODITOS MONOPETALOS. 339 801. Yerba anual, escabrosa, desparramada ó derecha j alta de 1' á 2', muy ramosa, alampiñada, con hojas simples, opuestas, lan- ceoladas ó elíptico-lanceoladas, aserradas ó sub-enteras, tripliner- vias j con las venas arqueadas, subsesiles y largas de 3 á 4". Cabe- zuelas axilares ó terminales y como apanojadas, pedunculadas, solitario-ternadas y blancas; involucro 2-seriado. Brazos del estilo obtusitos y peludos; aquenios del disco comprimidos, desnudos ó apenas coronados y los déla circunferencia sub-tetrágonos, tubercu- lados, coronados por dientes diminutos ó pelo, otras veces desnudos ó sub-troncados. Receptáculo pajoso v cuyas pajitas son lineares : eclipta, F. 59, T. II, S.-T. XI. 802. Brazos del estilo sub-cilíndrico-obtusitos , peludos desde el vértice casi hasta la base; aquenios del disco comprimidos y 4-go- nos, cortamente coronados y 4-dentados, 803. — Brazos del estilo cortamente cónicos y pelierizaditos. Aquenios de la circunferencia comprimido-callosos, 3-asurcados de cada lado, mientras los del dis- co, comprimidos, están provistos de alas estrechas, dentado-pesta- ñudas, ó todos comprimidos, desnudos, 804. 803. Arbustos ó matas marítimas, muy ramosos, plateado-sedo- sos ó alampiñados, altos de Vé, 4', con hojas simples, opuestas, sen- tadas, bastante espesas y algo carnoso-suculentas, espatuladas ó lanceoladas, mucronaditas, bien anteras, como sub-conadas por la base, en la cual se halla una especie de lígula ó membranita trian- gular. Cabezuelas solitarias, pedunculadas y terminales bastante grandes y anulosas, con los radies femeninos y cortos, ligu- lados V uniseriados, con los semiflósculos de divisiones obaovadas ú oblongas, siendo los flósculos del disco hermafroditas y5-fidos; involucro hemisférico, imbricado, con las escamas de la serie este- rior de ordinario foliáceas, aovadas ú oblongas y agudas , un poco abiertas, tan largas ó mas cortas que las interiores, obtusísimas y membranosas por la márjen. Receptáculo casi plano con pajitas lan- ceoladas : borrichia, F. 59, T. II, S.-T. XI. 804. Yerba anual desparramada y lampiña, echada, ramosa y -con hojas simples, alternas, cuyas inferiores son arrosetadas, cunei- formes, aserradas ó cortadas, las superiores solas pecioladas. Cabe- zuelas pequeñas, amarillas y pedunculadas, solitarias; involucro 2, 1-seriado. Flores de los radios de 10 á 12, mientras las del disco son pocas. Aquenios de la circunferencia cilindricos, y los del disco com- primidos; receptáculo plano y pajizo : chrysanthelliím, F. 59, T. II, S.-T. XI. 805. Cabezuelas paucífloras, discoideas, pequeñas, reunidas en grupos, con involucro doble, cuyo especial es dístico y comprimido, con escamas alternativamente conduplícadas ; corolas desigualmente 5-fidas, 806. — Cabezuelas pluri ó 1-floras, discoideas; involucro único imbricado, con las escamas superiores mas largas; corola 5- fida, de segmentos iguales; hojas frecuentemente glandulosas, 807. 806. Yerbas vivaces de tallo simple ó ramoso, tieso, derecho, ho- joso, con hojas simples, bastantes veces arrosetadas, alternas, espa- tulado-festoneadas, de cara inferior con pelo largo y sedoso, supe- 340 . MÉTODO DICOTÓMICO. riores, lanceoladas, y las florales acorazonado-deltoídeas ú obaovado- oblongas ó elípticas , aserrado-festoneadas, velludas inferiormente, las superiores oblongo-lanceoladas j las florales acorazonado-del- toídeas j peludas, en fin lanceolado-oblongas, pubescentes ó alam- piñadas. Glomérulos fornoados de algunas cabezuelas, largos de 4:"'-i3"'-lO"' y cónicos, sostenidos por un involucro general, pedun- culados, distantes y dispuestos en corimbos ó panojas delgadas, ó sentados y en espigas interrumpidas, cuyas flores son morado-pur- púreas ó á veces blancas. Aquenios claviformes , costilludos, con el vilano uniseriado y formado de 5 cerdas ó 1, 2-seriado y con algunas cerdas dilatadas por la base. Receptáculo desnudo : elei)hantoyt(,s, F. 59, T. II, S.-T. V. 807. Arbustos pequeños, matas ó plantas herbáceas anuales, mas ó menos ramosos, aterciopelados, pubescentes, velludos ó alampiña- dos, altos de 2'-4' hasta 8', con hojas simples, alternas, obaovado- redondeaditas ó lanceoladas, elípticas, aovadas ó aovado-oblongas, aovado-lanceoladas, elíptico-oblongas, ovales ó lanceolado-oblongas, lanceoladas, enteras ó repando-dentaditas, mucronadas, puntiagu- das, aguzadas ú obtusas, de base aguda, obtusa ó redondeada, mem- branáceas ó cartáceas, pecioladas, de cara superior lampiña ó alam- piñada, bastantes veces lustrosa y no raras veces escabrosa, mientras la inferior es pubescente, velluda ó pelierizado-escabrosa. Cabezue- las solitarias y sentadas por el ápice de las ramitas hojosas, ó en cimas sea dicótomas y sin hojas, sea escorpioídeas y también áfilas ó en fin escorpioídeas y hojosas. Aquenios cilindricos ó claviformes, con vilano ordinariamente doble, de manera que la serie interior es peluda, mientras la esterior es de ordinario formada de eseamas diminutas; receptáculo desnudo : xernonm, F.59, T. II, S.-T. V. 808. Vejetales de corola polipétala, 809. 809. Ovario libre ó supero, 810. — Ovario infero ó adherente, 1036. 810. Estambres hipojínicos, es decir, insertos en derredor del disco y por debajo del ovario, que en tal caso está siempre libre. 811. — Estambres perijínicos ó insertos en el cáliz, cualquiera que sea por otra parte la posición relativa del ovario, 978. 811. Estambres siempre libres, 812. — Estambres raramente libres, pero soldados entre sí y formando uno solo ó algunos andró- foros, 901. 812. Estambres siempre en número definido y fijo, mas ó menos constante, 813. — Estambres siempre en número indefinido, 868. 813. Cinco estambres ó menos, 814. — Seis estambres ó mas, 821. 814. Cuatro estambres, 815. — Cinco estambres, 816. 815. Vejetales sarmentosos de tallos y ramos delgados 3^ larguísi- mos, á veces algo nudosos, bastante blandos y casi herbáceos ó sub- leñosos, conteniendo en ciertas especies una savia abundante y pota- ble; no rara vez echan raices adventivas muy largas Hojas alternas, sencillas ó compuestas, y entonces de tres en rama, enteras, mas ó menos grandes, enteras ó mas ó menos dentadas; las simples son '"de ordinario anchas, redondeadas y bastante dobles, enteras y aco- razonadas por la base ; zarcillos simples, nunca enrollados en espiral VEJETALES HEEMAFEODITOS POLIPÉTALOS. 341 y opuestos á las hojas. Flores muchas, pequeñas, blancas ó verdoso- amarillentas, á veces coloradas, en racimos ó en cimas axilares ó terminales, con los brazos bastante largos y ramificados, pedicela- das y de cáliz monosépalo pequeño y 4-dentado ; corola de 4 pétalos estendidos y caducos, distintos; estambres enderezados y opuestos á los pétalos, saliendo de un disco 4 ó 5-lobo. Ovario único, bilocu- lar, con 2 huevecillos en cada celda, de cuyo ápice sale un estilo simple, cortísimo y á veces nulo; estigma algo bilobulado. Baya prieta ó morada, pisiforme, con 1 ó 2 semillas por causa del aborto de algunos óvulos : cissus, F. 122. 816. Siempre 5 estambres, 817. — Estambres 4, 5, 3 ó 2, 821. 817. Vejetales sarmentosos, provistos de zarcillos ramosos, rolla- dos en espiral y opuestos á las hojas, 818. — Yejétales nunca jamás sarmentosos, mas ó menos herbáceos, ó matas y frútices ; fruto cap- sular, 819. 818. Tallos leñosos, mas ó menos delgados, larguísimos y ramo- sísimos, con hojas simples, alternas, largamente pecioladas, masó menos lobuladas y undulosas á la par, con 2 estípulas caducas acom- pañando á la inserción del peciolo. Flores pequeñas, muchas, ver- doso-amarillentas, en racimos ó umbelas opuestos á las hojas y que ocupan el lugar de los zarcillos, que á veces las llevan, de cáliz muy pequeño, corto, sub-entero ó apenas 5-lobo; corola de 5 pétalos ad~ lierentes por el ápice, despegándose pues por la base y cayendo de una sola pieza á manera de gorro empujado por los estambres opuestos á ellos é insertos en la parte esterior del disco 5-lobo. Ova- rio único bilocular con 2 óvulos en cada celda, esférico, y de cuyo ápice sale un estigma grueso, sentado y un poco cuadrílobo. Baya bilocular, suculenta, con 2 ó 4 semillas, de forma, color y tamaño muy variados : vitis, F. 122. 819. Estilo único, terminado en un esticrma mas ó menos cabezu- do, 819 bis. — Estilos 3, apincelado-multiñdos por el vértice. Plan- tas herbáceas, matas ó frútices, mas ó menos ramosos, de 6" hasta 18-24" de alto y á veces algo mas 3', velludos, pelierizados ó pu- bescentes, de hojas alternas, simples, pecioladas, mas ó menos fes- toneadas, aserradas ó inciso-aserradas, oblongas, aovadas, lanceo- ladas ú oblongo-lanceoladas, aguzadas ú obtusas, con dos glándulas amarillas situadas por la base .ó sin ellas, estipuladas. Flores solita- rias, axilares, bastante grandes y amarillas, con los pedicelos fre- cuentemente acrescentes, hacia el peciolo, de donde sale bastantes veces, y bracteado, otras veces están sentadas en el vértice del pe- ciolo, pero siempre acompañadas de brácteas; cáliz 5-fido ó 5-parti- do; corola con 5 pétalos de ordinario mas grandes que el cáliz, en cuya garganta se insertan ; estambres 5, de anteras alargadas y er-- guidas. Ovario sentado, con 3 placentas parietales pluriovuladas. Cápsula 3-valve por el vértice y medianícida, con semillas ho^^osas: turnera, F. 145. 819 bis. Corola simétrica; 5 escamas petaliformes opuestas á los pétalos j separadas de ellos por un verticilo de filamentos estériles dilatados por el ápice ; anteras sin conectivos, abriéndose por una rajadura lateral, 820. — Corola no simétrica, formada de 5 pétalos, 342 MÉTODO DICOTÓMICO. cuyo anterior, mayor y labeliforme, está provisto de una uña cón- caya ó cortamente gibosa ; anteras conniventes cujas 2 anteriores tienen una glándula situada por la base, mientras el vértice está con frecuencia adornado con un apéndice, que es una prolongación del conectivo. Plantas herbáceas ó matas leñosas, ramosas, de tallos derechos ó tendidos, masó menos ramosos y desparramados, de raiz ordinariamente perpendicular, masó menos ramosa, lampiños, pu- bescentes ó tomentosos. Hojas simples, alternas, pero cuyas inferio- res son no rara vez opuestas, bastante estrechas, sentadas ó muy cortamente pecioladas, dentaditas ó aserradas, lampiñas, pubescen- tes ó tomentosas, acompañadas de 2 estípulas membranosas, linea- res, mas ó menos ovales y aguzadas. Flores á veces bastante gran- des y blancas ó pequeñas y moraduscas, solitarias, axilares, cuyo pedicelo bastante largo está articulado por encima de su parte me- dia, de cáliz con 5 sépalos; corola de 5 pétalos asimétricos. Ovario globoso, algo trígono, unilocular, con muchos huevecillos insertos en 3 placentas parietales, de cuyo ápice sale un estilo simple ter- minado por un estigma cabezudo algo lateral. Cápsula frecuente- mente acompañada de las envolturas florales marcescentes, unilocu- lar, polisperma, de dehiscencia medianícida^ cuyas 3 valvas llevan consigo las placentas pegadas lonjitudinalmente por su medio, se- millas mas ó menos globosas, tiradas con elasticidad al abrirse las cajitas : jonidhim, F. 86. 820. Arbustillos, matas sub-leñosas ó plantas herbáceas, de tallos derechos, mas ó menos ramosos y lampiños; de hojas simples, al- ternas, mas ó menos aserradas, mas ó menos pecioladas ó subsesi- les, oblongo-lanceoladas, elíptico-lanceoladas ó lanceoladas, aguza- das ó puntiagudas, acompañadas de estípulas fimbriadas ó franjeadas. Flores blancó-rosaditas, muy bonitas, en racimos terminales, axila- res, solitarias ó fasciculadas, cuyo pedicelo bastante largo y filiforme es articulado por encima de la base, de cáliz persistente con 5 sépa- los, cuyo ápice se termina por una ó algunas cerdas. Estambres al- ternos con las escamas y de anteras oblongas. Ovario trilocular con algunos óvulos'anátropos, de cuyo vértice sale un estilo simple ter- minado por un estigma pequeño algo cabezudo. Cápsula trilocular, polisperma, marjenícida, con 3 placentas, trivalvo, cuyas semillas tienen el embrión axil y cilindrico : smitagesia, F. 85. 821. Fruto capsular; corola siempre polipétala lejítima: 822. — Fruto drupáceo ; corola seudo-monopétala ó las mas veces polipétala. Arboles bastante grandes, altos de 30' á 40' ó mas bajitos, muy ramosos, de hojas simples, alternas, pecioladas, coriáceas, bien ente- ras, festoneadas ó aserradas y lampiñas. Flores de ordinario fascicu- ladas ó en corimbos, frecuentemente polígamo-dioicas ó hermafro- ditas,pedunculadasy blancas, pequeñas, y de cáliz pequeño, aorzado, 4-dentado, m.as rara vez 5, 6-dentado y persistente; corola hipoji- nica enrodada 4, 5, 6-partida, ó con los pétalos sub-distintos, ó lije- ramente reunidos por los filamentos, de estivacion imbricada; es- tambres en número igual á los pétalos ó segmentos de la corola seudo-gamopétala, alternos con ellos é insertos en su parte mas in- ferior, cuyos filamentos filiformes llevan anteras introrsas, bilocu- VEJETALES HERMA FEODITOS POLIPÉTALOS. 343 lares y lonjitudinalmente deliiscentes. Ovario sentado 4-locular,con los óvulos solitarios en las cekUis ó á veces mellizos, colaterales, pendientes del ápice del ángulo interno, anátropos. Drupa abajada, sub-globosa, coronada por el estigma subsesil, con tantos lóbulos cuantas celdas hay, con 4 pirenas ó huesecitos, monospermos y ve- nosos, con la semilla inversa, tríquetra, de testa delgadísima y membranácea ; "embrión situado por el ápice de un endospermo car- noso, pequeño, lonjitudinalmente partido por un surco ; raicilla su- pera : Ilex, F. 83. 822. Plantas herbáceas anuales, de tallo delgado enderezado ó tendido por el suelo, muy ramoso, altas de 8 á 16", con hojas sim- ples, opuestas, cortamente pecioladas ó sentadas, linear-lanceoladas ú orbiculares, sub-acorazonadas por la base, pequeñas y lampiñas. Flores pequeñas, blancas y en panojas terminales flojas, de cáliz con 5 sópalos, abiertos, mas cortos que los pétalos, aovado-lanceolados, aguzados, lampiños ó pubescentitos y largos de 1 lí2'"; corola de 5 pétalos con el ápice bíñdo, inclusos; estambres 3 ó 2 á veces o opues- tos á los sépalos. Ovario oval unilocular con algunos huevecilloSj de cuyo ápice salen 3 estilos. Cápsula oval igualando al cáliz, conte- niendo 8 ó2semillas pequeñas y abriéndose por 3 valvas : clrymaria^ F. 148. 823. En número fijo y constante, 824. — En número variable, 834. 824. Seis estambres, 825. — Mas de 6 estambres, 839. 825. Siempre tetradinámicos; corola de 4 pétalos unguiculados y dispuestos á manera de cruz; una silicua ó silícula, 826. — Kunca tetradinámicos; corola con 4 pétalos nunca dispuestos en cruz; cáp- sula silicuiforme sostenida por un podójino largo. Plantas herbá- ceas ó matas, de tallo de ordinario derecho, mas ó menos ramoso, algunas veces aguijonoso, desparramado y mas ó menos tendido, lampiñas ó pubescentes y bastantes veces glandulosas ; hojas de or- dinario palmatisectas y largamente pecioladas, acompañadas de es- típulas con bastante frecuencia aguijonosas, así como los peciolos. Flores de ordinario blancas ó rosadas, bastante grandes en racimos termxinales saliendo ordinariamente de la axila de una hoja floral, de cáliz con 4 sépalos; corola de 4 pétalos, cuya estivacion es abierta ó imbricativa; estambres insertos sobre el ginóforo filiforme, ó en un disco cónico y por debajo del ginóforo filiforme ó del ovario, con anteras lar^-as v alabardadas. Ovario único, cilindrico, eloní^-ado, mas ó menos fusiforme y sostenido por nn podójino mas ó menos largo y filiforme, unilocular, poliovulado, cijyo vértice lleva un es- tigma sentado y cabezudo. Cápsula bivalve, cuyas ventallas están separadas de la placenta intervalvular v parietal : cleoone, F. 88, T. I. 826. Una silicua, 827. — Una silícula, 833. 827. Con 4 glándulas situadas en el disco que sostiene el ovario, de las cuales dos están entre los estambres menores y el pistilo, mientras las dos otras se hallan entre las mas largas y el cáliz, 828; — Con dos glándulas en el disco ó sin ninguna, 831. 828. Silicua dehiscente, ni toruloi?a, ni articulada tampoco, 829. 344 MÉTODO DICOTÓMICO. — Silicua indehiscente, torulosa, algo avejigada, cónica y casi como articulada; plantas herbáceas anuales ó bisanuales, de raiz napi- forme, perpendicular mas ó menos gruesa, cuyo color, tamaño y forma varían mucho, siempre carnuda , de la cual sale un tallo de- recho poco ramoso, cilindrico, con algunos pelos tiesos, alto de 2' á 3', con hojas alternas, pecioladas, simples, mas ó menos enteras, ondulosas y pelierizaditas. Flores blancas ó rosadas en espigas ter- minales, de cáliz con 4 sépalos conniventes y casi cerrado, endere- zados, algo cerdosos, cuya base es un poco con figura de saco. Las dos glándulas correspondientes á los estambres mayores son casi ovales, algo deprimidas ó de ápice achatado, mientras las que cor- responden á los menores son irregularmente cuadradas y con dos depresiones en el vértice. Estigma casi oval, ondulóse por la circun- ferencia, con un surco mediano y cabezudo. Silicua que parece como bilocular por causa de un estrechamiento y cuyas semillas están envueltas en una sustancia blanca y como esponjosa : rai^lianus^ F. 89, T. II. 829. Silicua cuyo ápice se termina en pico corto, cónico, rollizo ó comprimido, estéril ó monospermo, con las valvas siempre con- vexas, 3, 5-nervias, 830. — Silicua sin pico, con las valvas mas fre- cuentemente convexas y sin nervios. Plantas herbáceas anuales ó bisanuales, cuyos repollos son frecuentemente muy desarrollados y comestibles, de tallo lampiño y-verde mar, alto de 3 ó 5', de ordi- nario muy poco ramoso ; hojas grandes, simples, alternas, peciola- das, enteras, ondulosas por la márjen, lampiñ^-s y glaucas. Flores blancas ó amarillas en espigas largas y flojas ó apanojadas, termi- nales, y de cáliz con 4 sépalos enderezados, conniventes y cerrados por el vértice, iguales y gibosos por la base, caducos, tan largos como las uñas de los pétalos. Las glándulas que corresponden á los estambres mayores son pequeñas, erguidas, mientras las correspon- dientes á los menores.son anchas, achatadas, casi con figura de her- radura, algo petágonas y con dos depresiones en su ángulo esterno ó inferior. Estigma hemisférico glanduloso, con una depresión trans- versal por el centro. Silicua cilindrica, alargada, algo comprimida ó tetrágona, algo torulosa, con el tabique elevado y las semillas es- féricas : Irassica, F. 89, T. II. 830. Planta herbácea anual , lampiña , de tallo derecho poco ra- moso y alto de 2' á 3', con hojas rajadas por la base ó no partidas, dentadas, ondulosas por la márjen, cujeas inferiores bastante gran- des y cortamente pecioladas son obaovadas, mientras las superiores casi sentadas son lanceoladas, simples y alternas todas. Flores ama- rillas en espiga terminal aveces apanojadas, cuyos pétalos igualan al cáliz abierto. Las glándulas correspondiendo á los estambres ma- yores son algo salientes, ovales, de ápice redondeado y casi llanas inferiormente, mientras las que corresponden á los menores son mucho mas anchas, menos pronunciadas y de ápice con una depre- sión irregular. Estigma cabezudo, casi hexágono y glanduloso. Si- licua cilindrica, torulosa, uninervia y con venas preeminentes, cor- tamente picuda, algo derecha sobre el pedicelo estendido, pico fili- forme y sin semillas : sinapis, F. 89, T. 11. vejetales hermafroditos polipétalos. 345 831. Planta herbácea perennal, acuática, ó de los lugares húme- dos, lampiña, de tallos largos, ramosos^ tendidosy de ápice erguido, con hojas alternas simples pinatisectas, con los segmentos aovados j ondulosos, desiguales j cuyo terminal es de ordinario mayor. Flores blancas en espigas terminales , de cáliz cerrado ; corola abierta cuyos pétalos tienen las uñas cortas dos Yeces mas largos que el cáliz ; 4 glándulas, hipojínicas. Silicua estendida igualando el pedicelo que la lleva, oblongo-linear, con las valvas convexas y casi sin veras; semillas dispuestas en dos series con los cotiledones acumbentes : nasturtium, F. 89, T. II. 832. Silícula comprimida laieralmente, con las valvas aquilladas y de ordinario alad.as; semillas una en cada celda; seis glándulas hipojínicas, 833. — Silícula lomentácea, separándose transversal- mente en 2 artejos indehiscentes, monospermos; 4 glándulas hipo- jínicas. Planta herbácea anual que se halla en las orillas del mar, de tallo como de 10 á 12" de alto, algo mas ó menos, lampiña ; hojas simples, alternas, lanceoladas, sub-enteras, algo pecioladas. Flores blanquecinas algo teñidas de rojizo, en espigas terminales, de cáliz con los sépalos erguidos, cuyos laterales son gibosos por la base, y casi cerrados por el ápice. Estilo simple ó nulo terminándose por un estigma obtuso á veces sentado. Silícula lanceolada algo tetrágona, provista de dos dientes por su parte media, formada de dos artejos, cuyo superior ó pico lanceolado-ensiforme terminado por el estilo, contiene una semilla erguida, tres veces tan largo como el inferior cuneiforme con una semilla colgante : ambos son de igual anchura : caMle, F. 81, T. I. 833. Plantas herbáceas anuales, lampiñas, de tallo recto mas ó menos ramoso superiormente, alto de 1, 2 y hasta 3'; hojas inferio- res pecioladas, simples, alternas, lanceoladas, mas ó menos aserra- das. Flores blancas, pequeñas, cuyos pétalos faltan algunas veces, en espigas largas y delgadas, cuya reunión forma panojas ó cimas terminales, de cáliz pequeño entreabierto; corola de pétalos iguales espatulados y con uñas largas; estambres casi iguales; las 6 gian- dulitas están sentadas en el disco : le^ñdmm, F. 89, T. ÍII. 834. Estambres en número variado, 834 Ms. — Siempre 5 estam- bres; vejetales polígamos, 229. 834 Ijís. De 4 hasta 8 estambres, 835. — De 5 hasta 10 estambres y mas, 836. 835. Arbustos ó árboles bajitos, mas ó menos ramosos, aguijono- sos, cuyos aguijones son estipulares; hojas alternas, compuestas, imparipinadas, con hojuelas sentadas, cuya terminal ó impar está raras veces abortiva ; raquis alado. Flores pequeñas en grupos axi- lares ó cimas, de cáliz 4 ó 5-lobo, persistente y monosépalo; corola con 4 ó 5 pétalos insertos en el fundo del cáliz; tantos estambres mas largos que los pétalos y cuyas anteras amarillentas son esertas. Ovario formado de 2 á 3 carpidlos distintos ; estilo único terminado por dos estigmas puntiagudos. Folículos 2, 3, 1 abriéndose por fin en 2 valvas, monospermos : fagara, F. 114, G. I. 836. Fruto formado de 5 ó á veces 4 carpidlos mas ó menos sepa- 346 • MÉTODO DICOTÓMICO. rados j secos, 837. — Fruto mas ó menos drupáceo ó cuyos carpidlos son casi drupas al principio, 840. 837. De 8 á 10 estambres, de los cuales algunos abortan; 5 ova- rios cuya base está reunida al favor del disco ; 5 estilos ginobásicos distintos ó reunidos por la base, 838. — De 5 hasta 8-10 estambres sin abortar ninguno, 839. 838. Árbol alto de como 20' á 30', recto., cuvo tronco no pasa de 4 á 6" de diámetro, con la corteza color ceniciento, ramoso supe- riormente, cuyos ramos derechos están algo desparramados, termi- nándose por ramitas cilindricas pubescentes y como empolvoradas á la par, con dos estrías lineares, verticales, bastante pronunciadas y opuestas, saliendo de la'base de la inserción de los peciolos. Hojas alternas compuestas, de tres en rama, con el raquis largo como de 6 á 7" comprimido por la inserción j de base algo triangular, rugoso y del color de las ramitas, casi cilindrico, con la cara superior acha- tadita y acanalada, como empolvorada, mientras la inferior ó es- terna es. convexa y escamosa; vértice dilatándose sensiblemente para volverse el ápice un triángulo aplanado anteriormente, cuyos lados laterales dan inserción á una hojuela grande y sentada, y en el ápice troncado se halla la tercera. Tales hojuelas, que forman la hoja trifoliolada de ese vejetal, son un poco desiguales, de tal suerte que la del medio es algo mayor que las laterales óvalo-lanceoladas con el ápice terminado en punta y la base aguzada, enteras, un poco ondulosas por la márjen y algo inequilaterales por la base, de ma- nera que el lado ó mitad interna es mas estrecha de como 1[2" que la esterna, son largas de 8 á 10" y anchas de 3 l|2"-4"-4 1|2", con la márjen algo revuelta; la hojuela mayor ó impar casi oboval pun- tiaguda por el ápice y aguzada por la base, es también inequilateral, larga de 10 á 12" y anchas de 4 á 4 1|2" ; son coriáceas con la cara superior de un hermoso color verde manzana, lustrosa y casi alam- piñada, porque con el lente se la ve muy finamente pubescente, y con muchas papulitas que corresponden á glándulas transparentes ; la costilla y nervaduras son visibles por causa de su color mas pálido y amarillento á la par, mientras la inferior de color verde amari- llento alíi'o aceitunado con la costilla, nervaduras v venas bastante pronunciadas, pubescente, como empolvorada y papulosa; tienen muchos puntitos transparentes visibles solo con el lente ; se hallan en la base de la hojuela mayor algunos pelos negros; raquis casi derecho y formando con la ramita un ángulo agudo, mientras las hojuelas son casi horizontales, ó algo inclinadas hacia abajo, tier- nas son blanquecinas , enteramente pubescentes, escamositas, las ramitas que las llevan entonces herbáceas son oval-estriaditas y también pubescentes y escamosas á la par. Las hojas de las ramitas floríferas son de ordinario mas pequeñas que las demás. Flores blancas en racimos especiformes y terminales, cuyo pedúnculo pu- bescente leproso y derecho es largo de 10, 12", cilindrico inferior- mente y oval-an guloso superiormente, terminándose por un racimo largo de 6 á 8", con brazos laterales esparcidos é irregularmente dispuestos, de manera que los unos son opuestos y los otros alternos pero sin simetría ninguna, largos solamente de 6 á 8"' con una brac- VEJETALES HEEMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 347 teita foliácea Tercie, lanceolada, saliendo de la cara inferior en donde se vuelven dicótomos, del medio de la horquilla sale una flor sentada j solitaria, y cada brazo secundario, tan largo como el principal, se termina por tres flores, cuya mediana es sub-sentada, mientras las dos laterales son pediceladas, con una bracteita en la inserción del pedicelo y otra como á V" del cáliz ; los grupos florales ocupando el vértice del racimo, son simplemente pedunculados, trifloros y con las dos bracteitas caducas ya señaladas ; los pedúnculos, pedicelos y cálices son pubescentes, ^empolvorados y de color gris algo pardusco. Cáliz monosépalo algo campanudo, con 5 divisiones profundas, ova- les, tomentosas y cuyo pelo está dispuesto por grupitos, leproso y mucho mas corto que la corola formada de 5 pétalos iguales, blan- co-amarillentos, bastantes veces soldados por la base, de manera que la corola parece monopétala, asaz espesos y quebradizos, como aterciopelados esteriormente, con glandulitas transparentes, ver- doso-amarillentas, de ápice como mucronadito, al principio dere- chos, se doblan mas luego hacia fuera, largos de 18"'', mientras el cáliz persistente lo es solamente de 4 á 5'". Estambres 7, 6, 5, dere- chos y esertos, pero dos solos son de ordinario fértiles y anteríferos, con el filamento ancho petaliforme ó estrecho, lameliforme y trian- gular, alargado y cuyo ápice puntiagudo está pegado en la base de la antera, larga como la mitad de él y de cara franjeada; los estériles ó estaminodios son generalmente mas largos, también petaloideos y parecen á primera vista otras tantas divisiones de la corola, pero su ápice algo mas estrecho se termina por un cuerpecillo glanduloso, redondo y amarillo, que no es otra cosa sino la antera abortada, cu- yos 2{3 inferiores son finamente lanudos, mientras el lj3 superiores lampiño; prefloracion de la corola sem.i-imbricada. Todo el fundo de la flor está ocupado por un disco hipojínico muy desarrollado, pero que no adhiere al fundo del cáliz y envuelve enteramente el ovario que aparece en el centro como 5 puntitos rojizos, es con figu- ra de corona y con 12 estrías que lo hacen parecer como lobadito, amarillo y largo de como 1|2"^ de 5 carpelos muy pequeños, de ápice rojizo hoyoso y rugosito, mientras la base es lisa y amarillo-pálida ; del centro y base sale un estilo único filiforme, cilindrico, blanco, tan larc'o com.o la corola v terminado por un estigma "Tueso, ama- rillento, cabezudo, oval, cóncavo y 5-lobo. Fruto formado de 5 car- pidlos ó cajitas dispuestos á manera de estrella, adheridos solamente por una parte de la base, oval-comprimidos y á la vez irregular- mente cuadrangulares,' pubescentes, cuyo pelo está en grupitos y blanco sucio ó blanquecino, con muchas glandulitas transparentes ; se abren superiormente por el ángulo obtuso ó interno hasta el ápi- ce ; entonces sus paredes se despegan en dos partes, una intepna blanca y como apergaminada, mientras la esterior verde y mas es- pesa SQ abre la primera ; contienen dos semillas casi esféricas, ne- gras, lustrosas y pegadas junto en la parte media del ángulo inter- no, del tamaño de un grano de mijo : loiqjJandia ó galijjea, F. 111, T. I. 839. IMatas ramosísimas de como vara y media de alto, con hojas alternas compuestas y hasta descompuestas, pecióladas, pero cuyas 348 MÉTODO DICOTÓMICO. superiores están casi sentadas, lustrosas, lampiñas y de olor fuerte y fétido, con muchas giandulitas transparentes. Flores amarillas y bastante grandes en cimas ó panojas terminales, de cáliz monosé- palo, plano, abierto y deciduo, con 4 ó 5 divisiones lanceoladas; co- rola de 4 á 5 pétalos cóncavos, acucharados, undulosos por la márjen, denticulados ó pestañosos, abiertos y algo estendidos, unguiculados y mucho ma^^ores que el cáliz; estambres derechos, diverjentes, esertos é insertos por la base y en derredor de un disco hipojínico amarillo y de ordinario mas ancho que el ovario, con tantas glándu- las redondas cuantos estambres hay. Pistilo formado de 4 á 5 carpi- dlos, rugositos y reunidos entre sí á favor del disco en que está pe- gada su base; el ovario ei pues compuesto y ginobásico : de entre ellos salen 4 á 5 estilos distintos interiormente, cada uno correspon- diendo al ángulo interno de un carpelo, pero reunidos entre sí supe- riormente y volviéndose un estilo único cuj'o ápice sé termina en un estigma con 4 ó 5 surcos ; dos óvulos colaterales hay en cada carpi- dlo. Fruto formado de 4 ó 5 carpelos ó cajitas, separadas inferior- mente y reunidos por el vértice y formando así una especie de cáp- sula : ruta, F. 112. 840. Estambres ocho, 841. — Estambres diez ó mas, 856. 841. Hojas simples siempre y sin zarcillos, fruto drupáceo, 842. — Hojas compuestas, con ó sin zarcillos, fruto capsular, abayado ó drupáceo, 844. 842. Plantas herbáceas, de hojas abroqueladas, y cuyo fruto como algo drupáceo es formado de 3 carpelos monospermos, 843. — Ar- bustos ó árboles bajitos, espinosos ordinariamente, ramosos, con hojas simples, alternas, elípticas ú oval-oblongas, enteras, obtusas, como de Y' de ancho sobre 2" de largo, lustrosas, verdes por ambas caras, lampiñas del todo y apenas pecioladas, coriáceas y ordinaria- mente acompañadas de una espina, corta y derecha, situada por la base. Flores en racimos, corimbos ó grupos axilares, reunidas 6 á 8 en el vértice de un pedúnculo común espinoso, pediceladas, peque- ñas, blancas y embalsamando el aire de un olor como de gerofle; de cáliz monosépalo, corto, lampiño, con 4 divisiones poco profundas y puntiagudas ; corola con 4 y á veces 5 pétalos distintos, oblongos, verduscos por afuera, mientras su cara interna está cubierta de un vello blanco, sedoso, de uñas muy cortas que se insertan entre las divisiones del cáliz, de ápice obtuso y algo doblado hacia fuera. Es- tambres de filamentos cortos, con anteras dorsi y basifijas á la par, biloculares. Ovario oblongo, redondeadito, 4-locular, á veces 3, 5- locular, con un huevecillo colgante de una placenta central en cada celda, del ápice sale un estilo corto que se termina por un estigma puntiagudo. Drupa amarilla, carnosa, oval ú oblonga, á veces glo- bosa, del tamaño de una ciruela y conteniendo un hueso monosper- mo : ximenia, F. 116. 843. Tallos largos como volubles ó trepadores, lampiños, con ho- jas alternas, largamente pecioladas, discoideas, bastante dobles, lampiñas y lustrosas. Primorosas ñores axilares y de ordinario soli- tarias, cuyos pedúnculos largos se enrollan á manera de hélice y así sirven á sostenerlas ramas; de cáliz monosépalo, con 5 divisiones VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 349 desiguales, cuya superior se alarga en espolón; corola con 5 pétalos largamente unguiculados, pegados en el fundo del cáliz, desiguales, mas ó menos franjeados ó barbudos, cuj'as dos superiores son majo- res. Ovario trílobo, trilocular, de cuyo vértice y de entre los lóbulos sale un estilo único terminándose por tres estigmas. Fruto formado de una especie de drupa con tres lóbulos ó carpidlos convexos, ape- nas carnudos, algo arriñonado-triangulares, asurcados, monosper- mos y desprendiéndose los unos de los otros : trojjceohim, F. 109. 844. Plantas abejucadas, provistas de zarcillos; corola cuyos pé- talos son provistos de apéndices ; disco formado de glándulas distin- tas sentadas entre los pétalos; fruto seco capsular, formado de car- pidios á veces samaroídeos, 843. — Arboles ó arbustos sin zarcillos; corola cuyos pétalos nunca están apendiculados ó sin escamas, pero algunas veces glandulosos ó barbudos por la base é interiormente ; disco anular ó formado de glándulas soldadas entre sí y dispuestas á manera de anillo. Fruto drupáceo ó abayado, otras veces capsular 850. 845. Fruto formado de 3 sámaras pegadas en el eje y por fin se- parándose las unas de las otras, 846. — Fruto capsular, 848. 846. Ala ciñendo el carpelo ó celda ; semillas crustáceas con arillo bastante pronunciado; cotiledones espesos y derechitos, 847. — Ala bacilar, escurrida á lo largo del carpóforo, celdillas velludas inte- riormente; semillas crustáceas, cuyo arilo es de ordinario diminuto; cotiledones encorvados. Arbustos sarmentosos ó bejucos sostenién- dose por medio de zarcillos pedunculares ó axilares, cuyas ramitas lampiñas, alampiñadas ó pubescentes llevan hojas alternas biterna- das, ordinariamente punteadas, con las hojuelas aovadas ó elípticas aserradas ó sub-enteras, á veces con algunos festones hacia el vér- tice, lampiñas, con la cara superior mas ó menos lusti'osa; raquis desnudo y triangular ó provisto de unamárjen estrecha, otras veces tiene una ala estrecha, acompañada de estípulas. Flores pequeñas, blanquecinas, en racimos simples ó compuestos y entonces apano- jados, pediceladas y saliendo de la axila de una bráctea ; de cáliz con 5 sépalos obtusos y pubescentes ; corola de 4 pétalos cada uno con una escama; estambres 8, acompañados de 4 ó 2 glándulas si- tuadas esteriormente á ellos. Ovario triangular, trilocular, de cuyo ápice salen tres estilos ó quizás un estilo único tripartido, termi- nado cada uno por su estigma correspondiente : serjaiiia, F. 121, T. II, G. I. 841Í. Bejucos muy ramosos cuyas ramitas son pubescentes ó alam- piñadas, con hojas temadas, alternas, estipuladas, pubescentes ó alampiñadas, con las hojuelas aovadas, aserradas ó incisas, cunei- formes desde el medio hasta la base. Flores pequeñas blancuzcas en racimos justa-axilares, cuyo pedúnculo está provisto de dos zar- cillos fuertes enrollados en espiral y situados por el ápice ; pedicelos fasciculados y articulados hacia la parte media ; cáliz con 5 sépalos ; corola de 5 pétalos provistos de escamas ; estambres 8 situados mas interiormente que las 4 ó 2 glándulas que les acompañan, y cuando son dos, solamente una es inferior y la otra superior y ambas esco- ta'das. Ovario triangular, trilocular y formado de 3 carpelos, de .350 MÉTODO DICOTÓMICO. cuyo ápice salen 3 estilos ó 1 único muy profundamente 3-partido, cada cual con su correspondiente estigma : urvillea, F. 121, T. II, G. II. 848. Disco redondeadito ó cilindrico glanduloso ; cápsula vesicu- lar é liincliada á la par, por fin loculícida, con semillas globosas, crustáceas, provistas de un arilo j con el embrión enroscado, 849. — Disco reemplazado por 2 ó 4 glándulas mas esteriores que los es- tambres ; cápsula nunca avejigada, 3-locular ó 1-locular por causa de aborto, septícida, con semillas crustáceas y provistas de un arilo. Arbustos samentosos ó bejucos sosteniéndose á favor de los pedún- culos ó por medio de zarcillos axilares, mu}^ largos y ramosísimos, con hojas alternas, estipuladas, biternadas, imparipinadas, con las divisiones mas inferiores, temadas ó simplemente imparipinadas, punteadas ó no : raquis desnudo, marjinado ó alado. Flores blanque- cinas, pequeñas, en racimos axilares ó juáta- axilares y á veces apa- nojados, pediceladasy saliendo de la axila de una bráctea; de cáliz con 5 sépalos aovados, distintos, ó de los cuales 2 están reunidos ; corola de 4 pétalos cuya base lleva inferiormente una escamita. Ovario algo escéntrico, trígono, trilocular, de cuyo ápice sale un estilo único inferiormente , y de vértice tripartido, terminándose por unos tantos estigmas. Cápsula de forma variada enteramente desnuda ó algunas veces provista de tres alas situadas liácia el eje y por la base, otras veces por el ápice, ordinariamente pubescente interiormente : ¡jaidlinia, F. 121, T. II, G. II. 849. Plantas herbáceas anuales y abejucadas ó perennales sub- leñosas y trepadoras, pubescentes, velludas, alampiñadas ó lampi- ñas, de tallos mas ó menos largos, delgados y muy ramosos; hojas biternadamente compuestas, alternas, sin estípulas y de hojuelas biternado-incisas y obtusamente aserradas ó solamente biternadas, aovadas y dos veces aserradas. Flores pequeñas blancas, en corim- bos axilares pedunculados, cuyos pedúnculos tienen dos zarcillos situados hacia el ápice, pedicelos articulado^ hacia la parte media; cáliz con 4 sépalos, cuyos dos interiores son mayores; corola de 4 pétalos asimétricos provistos de escamas, largos de 1-1 1{2'", 2-3"', 6"'; glándulas formando el disco, redondeaditas ó cilindricas, de las cuales 2 están opuestas á los pétalos superiores mas cortos que el superior. Cápsula sub-globosa, larga de 1", turbinado-redondeadita y larga de 4'" ó por ñn eliptical-angulosa y larga de 3" : cardiosper- mum, F. 121, T. II, G. IV. 850. Fruto capsular, 851. — Fruto abayado ó drupáceo, 853. 851. Pétalos sin escamas, estambres ordinariamente 8, pero al- gunas veces 10, cápsula seca 3 ó 1-locular, loculícida, con las se- millas crustáceas y ariladas, 852. — Pétalos provistos de escamas ; siempre 8 estambres; cápsula de pericarpio algo carnudo, dehis- cente', 3-locular, con las semillas bastante gruesas, negras, lustro- sas, crustáceas y envueltas en un arilo blanco, carnudo, muy des- arrollado y comestible. Árbol bastante alto, ramoso, de hojas alternas, pinadas, formadas de 3 á 4 pares de hojuelas obaovado- oblongas, bien enteras y largas de 3". Flores blanquecinas, pubes- centes, pediceladas en racimos axilares, y de cáliz con 5 sépalos im- VEJETALES HERMAFRÜDITOS POLIPÉTALOS. 351 bricativos; corola con 5 pétalos, oblongos, con las escamas grandes y bílobas ; estambres esertos, peludos inferiormente é insertos en un disco entero. Estilo 3-fido. Fruto rojo, lustroso, obaovado-oblon- go, obtusamente trígono, largo como de unas 4", obtuso por ambos estreñios : Uighia, F. 121, T. I, G. III. 852. Arboles ó arbustos con hojas alternas, pinadas j compuestas de 2, 4, 5, 6, 8 pares de hojuelas; flores blanquecinas, pequeñas, pediceladas y en racimos axilares ; de cáliz con 5 sépalos imbricati- vos; corola de 5 pétalos redondeados ó acogulladp-cuneiformes, des- nudos; estambres esertos; estilo mas ó menos cortamente trífido. Cápsula lampiña ó tomentosa, trígono-turbinada ó sub-globosa mas ó menos obtusamente 3-aquillacl a, semillas globosas, sub-comprimi- das ú ovoídeo-globosas, mas o menos envueltas por el arilo amari- llento, brunas ó negras y lustrosas : cíipania, F. 121, T, I, G. IV. . 853. Fruto drupáceo, 854. — Fruto como abajado ó mejor formado de 3 carpidlos, con el pericarpio carnudo, conteniendo una semilla globosa, gruesa, prieta, huesosa, no llenando enteramente la celda que contiene un poco de líquido hacia la madurez; entonces el peri- carpio mas ó menos amarillento es semi-transparente, conteniendo una sustancia como mucilajinosa, mas luego se vuelve seco, arru- gado esteriormente, bruno, lustroso y color como acanelado inte- riormente. Arboles bastante altos, coposos y asaz corpulentos, lampiños, de hojas alternas paripinadas y con 5-4, 5-3 ó 1 pares de hojuelas oblongo-lanceoladas, mas ó menos aguzadas, lampiñas ó de cara inferior pubescente, cuyo raquis está anchamente alado, ó so- lamente marjinado y hasta desnudo. Flores blanquecinas, peque- ñas, en racimos apanojados, pediceladas, y de cáliz con 5 ó 4 sépalos imbricativos ; corola con tantos pétalos cuantos sépalos hay, pesta- ñosos y con una escamita diminuta; estambres de ordinario 8, pero á veces 4 y hasta 10 : sapindus, F. 121, T. I, G. I. 854. Baya corticosa de un hermoso color ponceau cuando madura, tuberculosa y monosperma, 855. — Baya verde amarillenta, larga.de 1 á 1 1{2"^, esférica, 2, 1-esperma. Árbol muy ramoso que se eleva á 40 y 50' de altura, bastante corpulento, con hojas paripinadas, cuyas hojuelas biyugadas son elípticas ó elíptico-lanceoladas, bien enteras y lampiñas, alternas y con raquis algo alado. Flores pequeñas, blan- cas algo verdositas en racimos ramosos terminales, de cáliz monosé- palo, 5-partido, con segmentos imbricativos; corola de 4 pétalos desnudos. Ovario globoso bilocular,. con un óvulo enderezado en cada celda ; del ápice sale un estigma sub-sentadu y abroquelado. Drupa globosa del tamaño de un huevo de paloma, conteniendo una pulpa que parece como miel y es comestible ; melicocca, F. 121, T. I, G. II. 855. Árbol alto de como 25 á 30', con ramos largos y estendidos horizontalmente, de corteza pintadita; hojas alternas paripinadas y formadas de 2 á 3 pares de hojuelas lanceoladas, lampiñas, lisas y algo lustrosas, marcadas de un surco lonjitudinal. cortamente pe- cioladas y puntiagudas por ambos estreñios. Flores pequeñas en pa- nojas axilares ó terminales, aterciopeladas esteriormente, así como los pedicelos que las llevan ; de cáliz monosépalo como troncado, con 352 MÉTODO DICOTÓMICO. 5 divisiones muy cortas ó dientes ; corola de 5 pétalos reflejos j algo velludos interiormente; estambres 1 : ovario globoso uniloeu- lar j uniovulado, en cavo ápice hay un estií?ma bífido : euphoria, F. Í21,T.I, G. VIL 856. Diez estambres, 857. — De 10 hasta 30 v raras veces sola- mente 5 estambres ; fruto aqueniforme agarabatado, 867. 857. Fruto siempre seco, 858. — Fruto drupáceo ó algo carnudo, 862. 858. Fruto formado de 5, 10 y hasta 12-cocos, cuyos carpidlos in- dehiscentes son tuberculados ó espinosos 861. — Fruto no formado de carpidios, 859. 859. Fruto capsular, 860. — Una legumbre ó vaina. Bejucos gran- des, muy altos, muy ramosos, de tallo bastante grueso que parece una cadena chata, de ramitas lampiñas ó alampiñadas , con ó sin zarcillos; hojas alternas, pecioladas, simples, acorazonado-redon- deaditas algo bílobas por el ápice, anchas de 5, 4, 3" y largas de 6 l|2-4 l{2-3", palmatinervias y con 9 á 11 nervaduras ó formadas de dos hojuelas distintas, semi-aovadas, aguzadas* ó puntiagudas, sub- semi-acorazonadas por la base, paralelas, 3, 4-nervias, anchas de 8-4'', con peciolo largo de 6-3-2-l",-y acompañado de dos estípulas muy pronto caducas. Flores blancas en racimos terminales, pedun- culadas y cuyos pedúnculos bastante largos salen de la axila de una bráctea; de cáliz monosépalo cuyo tubo es campanudo y el limbo bilabiado y á la par 5-ñdo ; corola de 5 pétalos insertos junto con los estambres hacia la base del tubo calizinal. Ovario sentado, ter- minándose en un estigma cabezudo y ordinariamente oblicuo. Le- ííumbre bivalvo ó abriéndose tardíamente , llano - comprimida : scJinella, F. 130, S.-F. 2, T. IV, G. II. 860. Plantas herbáceas ó árboles altos, frondosos y corpulentos, con hojas alternas, compuestas y paripinadas, acompañadas de estí- pulas. Flores solitarias ó en grupos axilares y á veces terminales ; de. cáliz monosépalo, 5-partido, con las divisiones casi iguales ; corola de 5 pétalos iguales al cáliz y con uñas ; estambres algo desiguales y de ordinario tan largos como los pétalos. Ovario 5-locular, con dos óvulos en cada celda, pentágono, colocado por encima de un disco corto, cóncavo ó convexo y envuelto por las escamitas de los filamentos estaminales ; del ápice sale un estilo simple terminado por un estigma muy pequeño. Cápsula pentágona ó con 5 alas é in- dehiscente, 5-locular y ordinariamente de dehiscencia loculícida : ^ygopliyllum, F. 113, T. II, G. II. 861. Plantas herbáceas, de tallos ramosos, desparrados y tendi- dos por el suelo, con hojas alternas ó á veces opuestas, paripinadas, formadas de 8-3 ó de 3-4 pares de hojuelas, cortamente oblongas, oblicuamente oblongas ú ovales, de cara inferior sedosa' ó peluda; con dos estípulas bastante largas, enderezadas y lanceoladas. Flores bastante grandes, solitarias, axilares y pedunculadas ; de cáliz con 5 á 6 divisiones profundas ó sépalos abiertas y lanceoladas, deciduo ó persistente ; corola con 5 pétalos mas ó menos grandes y con uñas cortas; estambres insertos en el disco. Ovario pentágono ó con 10 á 12 estrías y con tantas celdas uniovuladas ; estigma sentado y 5- YEJETALES HERM A.FRODITOS POLIPÉTALOS. 353 fido. Carpidios 5, divididos interiormente por un seto transverso, formando así celdillas monospermas, ó 10 á 12 carpidios monosper- mos y separándose del eje central : trididus, F. 113, T. I. 862. Fruto drupáceo, 863. — Pericarpio un poco carnudo, 5, 2- locular, de dehiscencia tardía v septícida. comprimido y aquillado, con las celdas monospermas por causa de aborto. Arboles de mediana altura, cuyo tronco recto está cubierto de una corteza pardusca, cuyas muchas grietas dan salida á una resina verdusca; hojas opuestas, paripinadas, coriáceas, lampiñas, lustrosas, con 2, 5, 4 pares de hojuelas obaovadas ú ovales, otras veces oblicuamente lan- ceolado-elípticas, obtusas ó puntiagudas. Primorosas flores azules, pedunculadas, en grupitos axilares en la sumidad de las ramitas ; de cáliz con 5 sépalos ovales, pubescentes ó lampiños y mas cortos que los pétalos ; corola de 5 pétalos espatulados ú obaovados, largos de 6'" y azules ; estambres con las anteras corvas y de base bífida; ovario estipitado comprimido, con 2 ó 5 ángulos, 5 ó 2-locular, con 8, 10 huevecillos colgantes en cada celda ; del ápice sale un estilo simple corto, terminado por un estigma cabezudito. El fruto es una especie de cápsula de pericarpio algo carnudo, lampiña, lustrosa y amarillenta, con 2, 3 ó 5 celdas formando tantos ángulos, monosper- mas por causa de aborto, con semillas casi globosas cuyo embrión está encerrado en un endospermo agrietado : gimjacum, F. 113, T. II, G. I. 863. Fruto drupáceo lejítimo, proviniendo de un ovario único, 865. — Fruto formado de carpidios drupáceos, proviniendo de un ovario múltiple, 864. 864. Flores carmesí con los pétalos torcidos y derechos, estam bres 10, siempre esertos y procediendo cada uno de una escama basi- lar, 865. — Flores nunca carmesí, pero de un color blanquecino sucio, con 4 ó 5 pétalos no torcidos pero sí derechos; estambres 8 á 10 in- clusos y procediendo cada uno de una escama larga y escotada. Ar- boles de mediana altura, ramosos hacia el vértice, con hojas alternas pinadas ó temadas, de ordinario grandes, con las hojuelas bien en- teras, lampiñas y coriáceas. Flores en panojas terminales, de brazos muy largos y horizontales, ó en racimos; de cáliz monosépalo pe- queño 4, 5-partido ; corola de 4 á 5 pétalos mucho mas largos que el cáliz y ambos deciduos; 4 á 5 ovarios distintos, uniovulados, inser- tos en un ginóforo; estilo único y común. Carpidios sub-drupáceos, cuya semilla tiene un embrión derecho y sin endospermo : simaba, F. 110, G. III. 865. Árbol bajito, lampiño, ramoso, con hojas alternas imparipi- nadas, de raquis alado y formado como de dos piezas ó artejos, cuyo inferior es largo de 3 1^2, 3, 2 1|2", y el segundo ó superior de 20 ó 15'", anchos de como 4'" en la parte superior ó mas ancha, separa- dos por un estrechamiento ó mejor por un trecho en donde el raquis está desnudo y de donde salen las dos hojuelas inferiores opuestas y sub-sentadas, ó muy cortamente pecioladas, mientras las tres otras salen del ápice, la impar que sigue al raquis tiene el peciolo algo mas larguito, son elíptico-lanceoladas, con una "punta obtusa bas- tante larga, y aguzadas por la base, bien enteras pero undulosas por TOMO I 2 j 354 MÉTODO DICOTÓMICO. los bordes, largas de 3"-2" j anchas de 14 á 15"'. Flores bastante grandes y primorosas, en espigas terminales, peduncuiadas y sa- liendo de la axila de una bracteita ; de cáliz monosépalo 5-partido y pequeño, largo de Y" ; corola de 5 pétalos largos de 16"'; estambres tan largos como la corola ó lijeramente esertos. Cinco oyarios distin- tos, uniovuiados; estilo simple, filiforme, mucho mas largo que los estambres y terminado por un estigma apenas distinto j muy pe- queño. Drupitas biangulares y ovoideas á la par, largas de 4-6"', negras y con una mancha mas pálida situada por la base ; endocarpio crustáceo : qimssia, F. 110, G. 4. 866. Arbusto muy ramoso siempre verde que se eleva á 10 ó 15' de altura, cuyo tronco y ramas son cubiertos de una corteza bastante rugosa y agrietada color blanco sucio ó ceniciento, mientras las ra- mitas son de un hermoso verde lustroso, enteramente lampiñas. Ho- jas alternas imparipinadas, formadas de 7 hojuelas ovales, obovales ú óvalo-lanceoladas, enteras, algo desiguales, con el ápice redondo, obtuso ó un poco puntiagudo, pecioladas, alternas y largas de 1 á 1 1|2", la impar es siempre mayor y un poco espatuliforme, lustrosas, coriáceas y con m.uchos puntitos transparentes ; la hoja entera tiene como 3 á 3 1[2" de largo. Flores blancas, con olor de azahar, en ra- cimos axilares ó terminales, pedúnculos pubescentes provistos de una escamita por la base ; cáliz muy pequeño campanudo, monosé- palo 5-partido y persistente ; corola de 5 pétalos obóvalo-lanceola- dos, sin uña, doblados hacia fuera y algo enrollados, largos de 8-10"' ó algo mas, insertos en la parte esterior de un disco que ocupa todo el fundo del cáliz ; prefloracion un poco imbricada ; estambres des- iguales de los cuales 5 son mayores y 5 menores alternativamente, derechos, blancos con las anteras como dídimas y de un color ama- rillento verdoso sucio. Ovario poco pronunciado amarillento ver- doso, con algunas glándulas que parecen tuberculitos, saliendo del centro del disco, y que parece continuarse en un estilo grueso, ci- lindrico, blanco-amarillento, largo de como 4 á 5'" y terminándose por un estigma cabezudo, grande, oval, glanduloso y amarillo. Dru- pa roja, oval, del tamaño de un guisante, con glandulitas, conte- niendo un hueso oval puntiagudo, de color acanelado claro, no muy duro y con un surco lateral : murraya, F. 115, T. III. 867. Matas ó arbustillos muy ramosos, raras veces plantas her- báceas, aterciopelados, pubescentes, peludos y á veces cerdosos, cuyo pelo está de ordinario dispuesto á manera de estrella ; hojas alternas, pecioladas, simples, aserradas , festoneadas ó lobadas, rarísimas veces sub-enteras: dos estípulas pronto caducas, lanceola- das y colgantes acompañan á la inserción del peciolo. Flores pe- queñas, amarillas, pediceladas opuestas á las hojas ó en racimos ter- minales; de cáliz con 5 sépalos caducos y. ordinariamente con un apéndice situado por debajo del ápice; corola de 5 pétalos opuestos á unas tantas glándulas hipostémones, ó á veces nula ; estambres de base ceñida por una cúpula corta. Ovario único, esférico, pelieri- zado, 2, 5-locular con ias celdas biovuladas y divididas por un tabi- que falso : del ápice sale un estilo simple algo mas largo que los es- tambres, terminado por un estigma cuyas divisiones ó lóbulos son YEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 355 diminutos ó apenas visibles. El fruto es un aquenio agrarabatado ; embrión rectito de cotiledones foliáceos : trhcmfetta, F. 99, T. I, G. I. 868. Un pistilo único, 869. — Algunos pistilos en la misma flor y por consiguiente algunos ovarios y un fruto compuesto, 840. 869. Vejetales con suco propio, sea lechoso sea resinoso, 870. — Vejetales sin suco propio alguno, 878. 870. Fruto capsular, 871.. — Fruto drupáceo ó abajado ; vejetales polígamos ó no, 875. 871. Planta herbácea, espinosa, con suco lechoso amarillo, cáp- sula seca unilocular; hojas alternas, 872. — Arboles d arbustos, á veces parásitos, cápsula algo carnosa 4, 5, r2-locular; suco resinoso rojizo ; hojas opuestas; flores polígamas, 874. 873. Yerba anual que se eleva á como unos 3' de altura, de tallo derecho y poco ramoso; hojas simples, sentadas y un poco abrazan- tes, irregularmente sinuosas j lobuladas, con aguijones por sus bor- des, glaucas jcon manchas blancas largas de 6,5,4,3" sobre2 1/2,3" de ancho. Flores grandes amarillas cuyos pedúndulos axilares y uni- floros forman una especie de panoja terminal ; de cáliz con 2 á 3 sépalos, cóncavos, o val-puntiagudos y pronto deciduos ; corola de 4, 6 pétalos anchos, de vértice obtuso y redondeado, algo cóncavos y con uñas muy cortas ; ovario único, ovoideo, oblongo y algo cónico, anguloso y con púas, cuyo ápice está coronado por 4, 6 estigmas sentados, dispuestos á manera de los radios de una rueda y opuestos á las placentas. Cápsula espinosa, unilocular, membranosa, algo pentágona, aovada, polisperma, dehiscente por el vértice á favor de 5 ó 6 valvas pequeñas ; placentas intervalvulares no salientes inte- riormente y reunidos por el ápice ; semillas esféricas, pequeñas, prietas, rugosas y con muchos hoyuelitos é insertas en placentas li- neares, verticales y parietales, con embrión axil en un endo^permo oleajinoso : arjémone, F. 90. 874. Arboles mas ó menos bajitos que á veces se elevan hasta 30 ó 40' de altura, muy ramosos, ó arbustos con hojas simplemente pecioladas, coriáceas, enteras, con las nervaduras lineares y para- lelas, ó peninervias, ob-aovado-cuneiformes. Flores bastante gran- des, solitarias y axilares ó en cima» terminales"; de cáliz con 4 hasta 16 sépalos dispuestos ordinariamente en 2 verticilos foliáceos, cuyo esterior es sucesivamente mas pequeño; corola de 4 á 8 pétalos im- bricativos ; estambres muchos ó algunas veces en número deñnido en las flores hermafroditas, con anteras lineares y estrorsas. Ovario globoso, 4, 5, 12-locular, de celdillas poliovuladas, de ápice con es- tigmas, deprimidos, sentados y en igual número que las celdas. Cáp- sula cuyo pericarpio es algo carnudo, dehiscente en tantas valvas cuantas celdas tiene, con muchas semillas ariladas, cua^o embrión pequeño tiene los cotiledones plano-convexos y distintos : clusia, F. 96, T. I. 875. Anteras introrsas ó reventándose lateralmente ; ovario 4- locular, con las celdillas multi-ovuladas, con un estigma deprimido, sentado y 4-lobo ; drupa á veces muy gruesa, de carne amarilla y comestible : sale por las cortaduras hechas en su corteza una espe- 356 MÉTODO DICOTÓMICO. cié de goma-resina no aromática, 876. — Anteras introrsas pero nunca reventándose lateralmente ; ovario 1, 2-lociilar con un solo huevecillo erguido en cada celda; estilo distinto terminado por un estigma abroquelado y lobado ; drupa globosa verdusca y de como 1" de diámetro : por las grietas ó heridas de la corteza sale una re- sina aromática, 877. 876. Primoroso árbol que se eleva á 50 ó 60' de altura, muy co- poso y bastante corpulento, enteramente lampiño ; hojas opuestas, simples, pecioladas, coriáceas, obaovado-oblongas, redondeadas por el ápice, muy enteras, lustrosas, con venitas preeminentes por am- bas caras, largas de 8-4" sobre 5-3" de ancho. Flores pedunculadas, solitarias ó fasciculadas, blancas teñidas de color de rosa, saliendo del tronco ó de las ramas gruesas ó en grupos axilares, de como 1" de diámetro y de olor muy agradable ; de cáliz con 2 o 4 sépalos, muy pronto deciduos, iguales, cóncavos y bastante grandes, alcan- zando habta la mitad de los pélalos , corola de 4, 6 pétalos imbrica- tivos, obaovados, un poco cóncavos, redondeados, obtusos, casi igua- les y largos de 6-8'" : mammea, F. 96, T. III. 877. Primorosísimo árbol, muy coposo y bastante corpulento, que se eleva á una altura de 50' á 70', resinoso, cuyas ramitas lanjpiñas y parduscas son tetrágonas; hojas peninervias, opuestas, simples, coriáceas, eliptical-oblongas ú oblongas, obtusitas ó escotadas, cuya base se aguza hasta el peciolo, de tamaño muy variado y largas por consiguiente de 3" hasta 10" sobre 1 á 3" de ancho; con venas deli- cadas, densamente aproximadas, derechitas y visibles, especial- mente por la cara inferior, lustrosas y cortamente pecioladas. Flo- res pequeñas, blancas, algo rosadas y con olor agradable, en cimas arracimadas ó apanojadas axilares y mas cortas que las hojas; de cáliz con 2, 4 sépalos deciduos; corola con tantos pétalos, largos de 3'", ovales, cóncavos, abiertos y cuyos esteriores son algo menores; estambres als^unas raras veces en número definido : calophyllum, F. 96, T. II, G. I. 878. Eibtambres ordinariamente en número indefinido ó á veces y á la par definido, 879. — Estambres siempre en número definido, 892. 879. Estambres en número definido ó indefinido, 880. — Estam- bres siempre muchos y por consiguiente en número indefinido, 884. 880. Estambres muchos ó definidos, 881. — Siempre en número definido, 20, 6. Arboles bajitos ó bastante grandes, ramosos y cuyas ramitas son escamosas; hojas alternas, simples, lampiñas, coriáceas, enteras, lustrosas, oblongas ó elípticas, concolores ó discolores, lar- gas de 4-6" ó de 3-2", pecioladas. Flores en corimbos paucífloros y cortamente pedunculados, formadas de un cáliz cerrado en el capullo ovoideo y monófilo, reventándose, y entonces bífido ó 4-fido ; corola de 4 pétalos blancos, escamosos esteriormente y peludos interior- mente. Ovario estipitado, 4-locu:ar á favor de tabiques falsos, es- triado lonjitudinalmente, estrechado por debajo del estigma grande, redondo y umbilicado. Baya globosa del tamaño de una naranja pequeña : morÍ7isonia,Y. 88, T. II, G. III. 881. Corola de estivacion abierta ; baya estipitada y siempre glo- VE JÉTALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 357 bosa; hojas ternatisectas, 882. — Corola de preíloracion imbricativa; fruto sostenido por un ginóforo mas ó menos largo, casi siempre si- licu ¡forme y raras veces ovoideo ; hojas siempre enteras, 883. 882. Arboles bajitos que no alcanzan mas de 20' á 30' de altura; hojas alternas, simples, pecioladas, con los segmentos aovados, puntiagudos ó aguzados. Flores en racimos terminales, frecuente- mente polígamas, de cáliz con 4 sépalos muv pronto deciduos; corola de 4 pétalos ; estambres de 20 á 24 ó de 8 á 16, mas largos que la corola é insertos en un disco cónico. Ovario casi globoso, sostenido por un ginóforo delgado tan largo como los estambres, cuyo ápice lleva un estigma sentado v cabezudo : cratava, F. 88, T. II, G. I. 883. Arbustos ó árboles bajitos que se elevan lo mas á 30' de altura, muy ramosos y no muy corpulentos; hojas alternas, peciola- das, mas ó menos coriáceas, lanceoladas, lanceolado-oblongas, elíp- ticas, oblongo-lanceoladas, aguzadas, puntiagudas, escotadas ú ob- tusas por el ápice, de base redonda ó á veces acorazonadita, lam.pi- ñas por la cara superior, mientras que la inferior es con bastante frecuencia pubescente ó escamosa, ó con glándulas axilares ; estípu- las caducas. Flores blancas de ordinario ba^tante grandes, en grupos paucífloros, axilares ó en racimos terminales; de cáliz con 4 sépalos cóncavos y pronto deciduos, ó 4-partido ó 4-fido, con los segmentos valvares, otras veces imbricados : en el fundo tiene 4 glándulas opuestas á los sépalos ; corola de 4 pétalos muy pronto deciduos ; estambres muchos ó aveces 8, de ordinario muchítimo mas largos que la corola y de filamentos capilares derechos ; ovario largo, ci- lindrico, unilocular poliovulado, sostenido por un ginóforo filiforme muy largo : del ápice sale un estilo simple cortísimo, terminándose en un estigma cabezudo. Fruto á veces ovoideo y abayado, pero de ordinario es silicuiforme, alguna que otra vez seco y reventándose, y con mavor frecuencia abavado v también reventándose, con dos placentas v conteniendo muchas semillas : capparis, F. 88, T. II, G. II. 884. Cáliz con 3 sépalos; estambres muchísimos dispuestos en al- gunas series, cuyas anteras ovales, sentadas y grandes se abren por poros situados en la parte mediana de ambas caras; baya corticosa muy gruesa, unilocular, con muchísimas semillas horizontales, se- millas aromáticas bastante gruesas y de endospermo ruminado, 885. — Cáliz con 5, 7 sépalos; estambres muchos nunca dispuestos por series, cuyas anteras no sésiles se abren por una grieta; baya glo- bosa, roja, pequeña y solo con 6-8'" de diámetro, plurilocular, polis- perma. Árbol que se eleva á como unos 30', ó arbusto de solo 10' de altura, muy ramoso y de ramitas velludas ó glandulosas; hojas simples, alternas, pecioladas, enteras, oblongas ú oblongo-lanceola- das, aguzadas por el vértice y de base semi-acorazonada, algo in- equilaterales, de cara superior aterciopelada, mientras la inferior es peludo-tomentosa, largas de 6-2" sobre 3' 1/2" de ancho, con el pe- ciolo largo de 3-1'" é igualando casi las estípulas lineares que lo acompañan. í'lores blancas bastante grandes, cuyos pedicelos axi- lares en la sumidad de las ramitas son solitarios ó fasciculados, lar- gos de I-l 1[2" y de ápice dilatado á manera de disco, y de cáliz con 358 MÉTODO DICOTÓMICO. 5, 7 sépalos; corola de 5, 1 pétalos obaovados, largos de 6"' j esce- diendo un poco la punta filiforme de los sépalos lanceolados ; disco peludo sosteniendo un ovario 5, 4, 6-locular y multioYulado, de cuyo ápice sale un estigma sentado, piramidal j con algunos ángulos. Baja polisperma, cuyas semillas muy diminutas y ovoideas están insertas en unas placentas lameliformes que dividen las celdas ; em- brión cilindrico axil con cotiledones casi igualando la radícula : rmintingia, F. 99, T. I, G. III. 885. Árbol no muy grande, pero que se eleva hasta 30' de altura, muy ramoso y de tronco bastante grueso ; hojas simples, alternas, enteras, oblongas, coriáceas, muy enteras, lustrosas y cortamente pecioladas, lampiñas. Flores solitarias, grandes, blanquecinas, olo- rosas, cuyos pedúnculos laterales ó casi opuestos á las hojas, largos de como 4-6'' é inclinados, llevan dos brácteas situadas hacia su parte media ; cáliz con 3 sépalos ; corola con 6 pétalos, cuyos este- riores oblongos, undulosos, amarillos y disciplinados, de manchas purpúreas, son como mitad mas cortos que los interiores, tomen- toso-pestañosos y blanquecinos esteriormente, acorazonados, cohe- rentes por la base y conniventes. Estambres inclusos y dispuestos en 10 á 12 series sobre el disco. Ovario esférico unilocular con mu- chos Imevecillos, de cuyo ápice sale un estigma sésil y aplanad©. Baya esférica muy gruesa, como de unas 5 á 6" de diámetro, lam- piña, corticosa, cuya única celda contiene muchas semillas ovales ú oblongas, largas como de \" engastadas en pulpa poco abundante : monodora, F. 95, T. II, G. III. 886. Cápsula esférica, erizada, cuyas celdas contienen alguna pulpa, 887. — Cápsula lejítima ó siempre sin tripa alguna, 888. 887. Árbol muy ramoso superiormente, de tronco bastante grueso y que se eleva hasta 25 á 30' de altura; hojas simples, alternas, pecioladas, situadas hacia la sumidad de las ramitas cilindricas y cubiertas de una peluza aleonada que las hace parecer como sedo- sas, oblongo-ovales, un poco aguzadas por el vértice, mientras la base es algo acorazonada, finamente aserraditas, de cara superior aterciopelada y lustrosa, de color amarillento-verdoso, mientras la inferior, algo mas pálida, con reflejo dorado y sedoso á la par, esto- mentoso-sedosa, con la costilla, nervaduras, nervios y venas bas- tante pronunciados j cubiertos de pelo sedoso-aleonado ; el vello está dispuesto á manera de estrella; largas de 6, 8, 12 y hasta 15" y anchas de 4 1|2, 6 y hasta 8"; peciolo bastante grueso, largo de 1 1{2 á 2 li2", cuya inserción está acompañada de dos estípulas trian- gulares largas de como 4'" y anchas de 2"\ muy pronto caducas. Primorosas flores color de oro muy olorosas, en racimos paucífloros, cuyo eje ó pedúnculo es lateral ú opuesto á la hoja correspondiente, muy pelierizado, así como los brazos, los pedicelos y cálices, con dos brácteas situadas por su inserción y otras á lo largo de los brazos cada vez que de ellos sale un pedicelo, muy pronto deciduas ; cáliz monosépalo profundamente 5, 4-partido, cuyas divisiones son como mitad mas largas que los pétalos, lanceoladas, abiertas, lampiñas interiormente y largas de 6-8'" sobre 2'" de ancho, de prefloracion valvar ; corola con 5 pétalos ó á veces 4, obovales, derechos y al- TE JÉTALES HERMAFEODITOS POLIPÉTALOS. 359 temando con las divisiones calizinales ; estambres dispuestos en muchas series, cujas anteras son pegadas en el ápice de un fila- mento blanco, tan largo como ellas y velludo : tienen el ápice ador- nado de un apéndice membranoso entero ó escotadito, tan largo como la mitad de las celdas que principian por abrirse por el ápice adlierido y por fin por una rajadura longitudinal, oblongas é in- trorsas. Ovario 8 ó plurilocular y pluriovulado, de cuyo ápice sale un estilo eserto simple y terminándose en un estigma ensanchado y encorvado : apeiha, F. 99, T. II, G. II. 888. Silicuiforme, 891. — Nunca silicuiforme, 889. 889. Cápsula erizada rojo-moradusca ; muchas semillas pegadas de dos placentas parietales y con arilo suministrando tinte amarillo rojizo; tiores color de rosa, 890. — Cápsula pubescente, ovoidea y del tamaño de un huevo de gallina, cuyas semillas sin arilo pero con pelo blanco y sedoso están pegadas de 5 placentas parietales; flores grandes y amarillas. Árbol alto de 20 á 30', de tronco derecho y de 6 á 8" de diámetro, con ramos derechos; hojas grandes alternas ó quizas mejor esparcidas, largamente pecioladas, simples, de base acorazonada y 5-lobas, con los dos lóbulos de la base menores, y todos ovales, puntiagudas, lampiñas por ambas caras, y lustrosas por la superior, undulosas, anchas de 4-5" sobre 5-6" de largo, sin contar con el peciolo que lo es de 6" y cuya inserción está acompa- ñada de dos estipulitas, subulado-triangulares, pronto caducas y pubescentes por la cara esterior, derechas y casi aplicadas al tallo ; muy tiernas las hojas están pubescentes y moraduscas. Flores pri- morosas, grandes, en panojas terminales saliendo antes que las ho- jas y floreándose sucesivamente principiando la florescencia por las mas inferiores , los brazos que las llevan son largos como de 6" y tanto mas pubescentes cuanto mas tiernos, pedúnculos bastante gruesos pubescentes, moraduscos superiormente é inclinados, salen de la axila de una bráctea caduca y llevan una flor que se desprende con mayor facilidad, y de cáliz monosépalo, profundamente 5-fldo, cuyos segmentos dispuestos como en dos series parecen casi imbri- cados ; la serie esterior es formada de dos mas pequeños, mas cor- tos, oval-lanceolados, puntiagudos, largos de como 10'" y anchos de 4"' por la base, son opuestos; los tres interiores, mucho mayores, son casi petaloídeos, ovales, redondeados y obtusos por el ápice, amarillentos, valvar-torcidos y largos de 14-16"' sobre 10"' de an- cho; todas las divisiones son pubescentes esteriormente y también interiormente y como plateadas y con manchitas rojas, que nos han parecido glandulitas llenas de un tinte análogo al onoto, cuyo olor tiene, de bordes pestañosos y algo membranosos; limbo marces- cente, mientras la base del cáliz se vuelve como una cúpula que en- vuelve la base de la cápsula : el ápice del pedúnculo participa tam- bién un poco de ese desarrollo; corola de como 3-4" de diámetro, de 5 pétalos ob-acorazonados, undulosos, un poco cuneiformes por la base, largos de como 2 1[2" y anchos de 2" por el vértice y de 1 lp2" por la parte media, con manchitas rojas, especialmente por la cara interna a^ hacia la base, marcescentes ; estambres de filamentos al principio arqueados y mas luego derechos, largos de 10 ál2' ', con 360 MÉTODO DICOTÓMICO. anteras basifijas, enderezadas, de un color amarillo mas subido que ellos, casi cónicos, largas de como 1 l\2"' , con un surco lonjitudinal situado por la parte media de la cara, pero abriéndose por dos poros situados por el ápice. Del centro de un disco que llena todo el fundo del cáliz y que da inserción á los estambres y pétalos, sale el ovario ovoideo, cubierto de pelo sedoso j como plateado, unilocular, poli- ovulado, de cuyo ápice sale un estilo filiforme, cilindrico, largo de \b"' , arqueado, con el vértice doblado por arriba y terminándole en un estigma lateral con forma de boca algo franjeada. Cápsula ovoi- dea ó casi redonda, como membranosa, algo pentágona, pubescente y de un color sea moradusco, sea aleonado y algunas veces gris ama- rillento : se abre por los ángulos en 5 valvas en cuyo medio se bailan las placentas verticales, membranosas y bastante desarrolladas, de manera que simulan tabiques; su parte interna y libre, mas des- arrollada y como esponjosa, lleva muchas semillas dispuestas en dos series laterales y pegadas por medio de un podospermo bastante pronunciado que ocupa la parte mas delgada y mas derecha de la semilla cilindrica, arqueada, prieta por la parte convexa cubierta de pelo blanco, suav^e y bastante largo, mientras la parte cóncava es color blanquecino amarillento y lampiña; no todavia maduras con- tienen el tinte ya señalado, que se halla también en la parte inte- rior de la cápsula todavia verde : coclospermum, Y. 8*7, T. II, G. II. 890. Primorosos árboles que se elevan de 15, 25' y hasta 30' de altura, ó que se quedan arbustos de 8 á 10' de alto, muy ramosos, lampiños, con hojas simples, alternas, pecioladas, aovadas, acora- zonadas por la base, en donde hay un punto morado oscuro corres- pondiente al ángulo y al ápice del crecido del peciolo, y de vértice con una punta bastante larga, lisas, lustrosas, de color verde os- curo algo teñido de morado, enteras, con puntitos, lampiñas, anchas de 3" y largas de 4", sin el peciolo, que lo es de 2". Flores primo- rosas bastante grandes, color de rosa pálido ó blancas, en colimbos terminales, cuyos pedicelos ob-cónicos, largos de 6'", están acompa- ñados por la inserción de dos brácteas opuestas, cóncavas, oval- lanceoladas, caducas, cuya base persistente se vuelve un tubercu- lito, achocolatadas, los pedúnculos y pedicelos son aterciopelados ; cáliz con 5 sépalos, distintos, imbricados, caducos y alternando con otras tantas glándulas esteriores ; corola.de 5 pétalos obovales, cón- cavos, abiertos, de vértice undulóte y obtuso, cuyos bordes no tar- dan á doblarse hacia dentro, con uña muy corla; estambres mas cortos que los pétalos, de íilamertos flexuosos, con anteras basifijas color de lila, acuñadas y abriéndole por dos poros ó rajaduras muy cortitas situadas por el ápice de las celdas, insertos por la superficie de un disco pentágono bastante desarrollado, color de carne con puntitos rosados, de cuyo centro deprimido sale un ovario oblongo, pelierizado, algo comprimido y de cuyo ápice nace un estilo de base cilindrica, mientras el vértice es mucho mas ancho, comprimido y como espatuliforme, terminándose por un estigma en forma de boca oval, glaudulosa, con dos labios redondeaditos; el estilo, doblado al principio y ebcondido entre los estambres, se endereza mas tarde y es mas largo que ellos. Cápsula colorada ó algunas veces verduzca, VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 3G1 oval-comprimida, algo puntiaguda por el vértice 3' acorazonada por la base, cubierta de púas, unilocular, abriéndose por dos valvas car- gando con las placentas situadas verticalmente en su parte media, llevando muchas semillas apeonzadas y casi enteramente cubiertas por el arilo : dixa, F. 87, T. lí, G. I. 891. Plantas anuales sub-frutescentes ó matas leñosas, á veces arbustos, ramosísimos, de tallo derecho ó á veces desparramado, mas ó menos pubescentes, peludos ó lampiños, de hojas simples, alternas, pecioladas, aovado-oblongas ó aovadas, oblongas, aguza- das ú obtusas por el ápice, ó con una punta, aserradas ó festonea- das. Flores amarillas solitarias ó en grupos cuyos pedúnculos cortos uni ó paucífloros son opuestos á las hojas, de cáliz con 5, 4 sépalos caducos: corola de 5,4 pétalos espatulados ó á veces obaovado- oblongos igualando al cáliz ó algo mas cortitos que él ; estambres hipójinos ó insertos en el ápice de un ginóforo corto y ceñidos por una cúpula undulosa situada por la base. Ovario elongado, cilin- drico 2, 5-locular, con muchos huevecillos, de cuyo ápice sale un estilo simple terminándose en un estigma algo dentado ó trífido. Cápsula loculícida de ordinario elongada ó silicuiforme, lampiña ó pubescente, cuyo ápice es raras veces entero, pero que se termina por 5, 3 cuernecillos, 5, 3-locular, con muchas semillas, cuyo em- brión encorvado tiene los cotiledones foliáceos : corclioriis, F. 99, T. I,G. II. 892. Vejetales nunca acuáticos, frútices, arbustos ó matas, 892 Ms. — Vejetales herbáceos y siempre acuáticos, 415. 892 his. Fruto mas ó menos seco, 893. — Fruto carnudo, 899. 893. Del todo y siempre seco, 894. — Fruto formado de carpidlos abayados y por fin secos y dehiscentes, 898 Ms. 894. Cuyos muchos carpelos 1, 2-espermos dispuestos en espiga y por fin coherentes forman un estróbilo ; 894 Ms. — Carpidlos, ca- jitas ó carpelos nunca dispuestos en estróbilo, 896. 894 his. Árbol grande y coposo que se eleva con frecuencia hasta 80' de altura, con hojas alternas, pecioladas, simples, enteras, co- riáceas, lustrosas, del todo lampiñas, con puntitos transparentes, redondeadas ó cuneiformes por la base, cuyo tamaño es bastante variado y largas de 5-3-6", acompañadas de estípulas caducas y en- vainadoras. Flores grandes y primorosas, blancas y muy fragantes, terminales y solitarias, de cáliz con 5 sépalos coloridos y deciduos : corola de 6, 12 pétalos; muchísimos estambres. Estróbilo abrién- dose por medio de la rotura irregular de los carpelos que lo forman : talauma, F. 94, T. II. 895. Fruto formado de carpidlos ó carpelos mas ó menos nume- rosos, foliculares ó no, 895 bis. — Muchísimos aquenios agrupados en cabezuela redonda ó mas o menos cónica, 898. 895 bis. Carpelos estrellados, no foliculares, abriéndose por la cara superior, siempre mono^permos y muy aromáticos, 896. — Carpelos nunca estrellados, siempre foliculares, con una sola ó al- gunas semillas ariladas, 895 bis. 896. Árbol que se eleva á 15-25' de altura, muy ramoso y bas- tante copudo, con hojas simples, alternas, del todo lampiñas, agru- 362 MÉTODO DICOTÓMICO. pacías ó como apiñadas hacia el vértice de las ramitas, cortamente pecioladas, elípticas, alargadas y de ápice aguzado en punta, coriá- ceas, largas de 2 á 2 1/2 sobre 1 1/2 de ancho, con 2 estípulas cadu- cas. Flores amarillentas, solitarias, cuyos pedúnculos largos salen de la axila de las hojas superiores; cáliz deciduo de 3, 4 sépalos es- camosos y desiguales; corola con 16, 20 pétalos dispuestos en 3 se- ries, cuyos mas interiores, lineares y obtusos, son erguidos, mien- tras los mas esteriores, estendidos y mas anchos, son doblados hacia fuera y abajo á la par ; estambres de filamentos cortos inser- tos en un disco hipojínico bastante desarrollado, con las anteras pegadas al filamento por su cara interna. Ovarios 8,16, uniloculares y monospermos; estilo lateral corto saliendo de la cara esterna del carpelo correspondiente y terminándose por un estigma asurcado situado en su cara interna : ilUcium, F. 94, T. I. 896 dis. Arilo completo; los 2 sépalos interiores máximos, cónca- vos, volviéndose endurecidos después de la florescencia y encerran- do el fruto ruptil, 897. — Arilo no enteramente completo j lacera- do; todos los sépalos iguales y ninguno de ellos se vuelve endurecido después de la florescencia; carpelos dehiscentes. Arbustos abejuca- dos y trepadores, mu}' ramosos y largos, con hojas simples, peni- nervias, alternas, rugosas, pecioladas, obaovadas ú obaovado-oblon- gas, aserradas ó enteras, con los dientes apartados, terminándose por 8, 16 ó 12 venas equidistantes adelgazándose hacia la base de la hoja, mas ó menos preeminentes inferiormente. Flores aveces po- lígamas en panojas terminales ó laterales, flojas, con los brazos mas ó menos cortos y arracimados; cáliz con 5 sépalos abiertos, de los cuales uno es esterior, dos internos, sub-valvados, pero que no son mas largos que los demás, obaovados y sedosos por la cara interna; corola de 4, 6 pétalos y algunas raras veces menos ; estambres inde- finidos, cuyas celdillas de las anteras diminutas son diverj entes. Carpelos 3, 5, mas rara vez 1, 2, aguzados, dehiscentes por la parte interna, con muchos huevecillos dispuestos en dos series : tetracera, F. 95, G. I. 897. Arbustos abejucados y trepadores, muy ramosos y bastante largos, con hojas simples, alternas, ásperas, aovado-oblongas, sub- enteras ó serpeadas, peninervias y con las venas dispuestas por el estilo de las de la tetracera, de peciolo marjinado por el ápice. Flo- res amarillas suave olientes, en panojas terminales ó mas veces axi- lares y paucífloras, saliendo en especial sobre los ramos del año an- terior; cáliz con 5 sépalos desiguales, de los cuales 2 son esteriores y 2 interiores, sub-valvados: corola con 1 á 6 pétalos; estambres indefinidos cuyas celdillas de las anteras son diminutas y diverjen- tes. Carpelo 1, 3; estigma abroquelado. Folículo solitario ruptil, monospermo por causa de aborto del otro óvulo: clavilla, F. 95, G. II. 897 l)is. Flores hermafroditas ó polígamas; aquenios lonjitudinal- mente ribeteados ó encrestados; hojas simples, siempre enteras, 898. — Flores siempre hermafroditas y de ordinario amarillas ; aquenios lisos, estriados ó tuberculados ; hojas de ordinario multífi- das y algunas veces enteras, siempre simples. Plantas herbáceas TÉJETELES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 363 anuales ó vivaces, bastantes veces con la raiz fasciciüada ; hojas radicales j algunas solamente caulinares, alternas y correspondien- do á la inserción de los pedúnculos ó salida de los ramos. Flores á veces bastante grandes y vistosas, algunas veces blancas, ama- rillas,- terminales y solitarias ó apanojadas y raras veces sen- tadas en la bifurcación de los ramos; cáliz con 3, 5 sépalos cadu- cos, foliáceos y de estivacion imbricada; corola de 5 á 15 pétalos hi- pojínicos, cuya base presenta por su parte interna un hoyito necta- rífero ó está provista de una escamita; estambres mas cortos que los sépalos y pétalos, ordinariamente muchísimos, pero no rara vez son pocos en las flores pequei5as. Ovarios muchos, libres, unilocula- res, con un solo óvulo erofuido v ascendente de la base de la celda; carpelos muchísimos volviéndose aquenios en cabezuelas ó espigas, sub-comprimidos, cuyo ápice se termina en un cuernecillo ó rejón, de semilla erguida : raimnculus, F. 898. Plantas herbáceas de los lugares anegadizos y pantanosos, con hojas simples, radicales, largamente pecioladas, de limbo ente- ro, erguidas ó nadantes, acorazonado-redondeaditas, con 9, 5 ner- vaduras, que saliendo de la base alcanzan al vértice, ó alabardado- ovales, con las orejitas á veces puntiagudas. Flores blancas siempre, hermafroditas ó á veces polígamas, en umbelas ó verticilos en el vértice de un bojordo mas ó menos alto, de 6" hasta 12": cáliz con 3 sépalos policostilludos, algo mas cortos que la corola, de tantos pétalos blancos é imbricados ; estambres de ordinario definidos y en- tonces 6, 12. Aquenios formando cabezuela, muchos, picudos ó no, monospermos, distintos ó adheridos un poco por la base; semilla sin endospermo, de embrión ordinariamente encorvado, con la raicilla delgada : echi nodo rus, F. 3C. 898 Ms. Arboles bajitos de 20, 25 ó 30' de altura, con los ramos largos y de ordinario horizontales, ó arbustos con hojas simples, al- ternas, dísticas, cortamente pecioladas, coriáceas, lanceolado-linea- res, oblongo-lanceoladas ó lanceoladas, aguzadas en punta por el vértice, obtusas por la base, de cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior estáá veces pubescente ó alampiñada, enteras. Flores axilares, solitarias ó fasciculadas, de ordinario sedosas, cor- tamente pedunculadas, con brácteas cuya superior envuelve mas ó menos al tubo calizinal cupuliforme, trílobo ótridentado; corola de 5 pétalqs lineares, espesos, esteriores, cóncavos, mientras los inte- riores, algo mas cortos, son aquillados por la cara interna; estam- bres insertos en un disco amarillo encerrando los ovarios, con ante- ras de conectivo truncado. Ovarios 2 ó muchos , distintos , con 2, 6 huevecillos suturales; estilos conniventes y formando un cuerpo có- nico : xyloiña, F. 95, T. II, G. I. 899. Baya lejítima y sincárpica, 900. — Carpidlos abayados esti- pitados, con semillas hoyosas. Árbol alto, ramoso, de hojas simples, alternas, membranosas, alampiñadas, pecioladas, oblongas, cuyo vértice se termina en punta; flores grandes, pecioladas, fascicula- das y axilares, de cáliz con 3 ó á veces 4 segmentos reunidos por la base y puntiagudos ; corola de 6 pétalos dispuestos en 2 series, cuya interior es mas cortita; estambres con un conectivo que se prolonga 364 MÉTODO DICOTÓMICO. mas allá del ápice de las celdillas de las anteras estrorsas en apén- dice aovado y puntiagudo; muchos ovarios insertos en un disco acu- bileteado, distintos, algo comprimidos, con muchos huevecillos dis- puestos en dos series, terminados por un estigma agudo : cananga, F. 95, T. II, G. II. 900. Arboles bajitos, mas ó menos frondosos y altos de 25 á 30', ó arbustos de ordinario lampiños, con hojas simples, alternas, mas ó menos punteadas, cortamente pecioladas, coriáceas, enteras, oblongas, elípticas, lanceolado-oblongas ú oblongo-lanceoladas, de vértice puntiagudo ú obtuso, lampiñas, pubescentitas y por fin lam- piñas, ó de cara inferior peluda ó aterciopelada, cara superior de ordinario lustrosa. Flores solitarias, terminales ó laterales y opues- tas á las hojas, ordinariamente bastante grandes y de cáliz pequeño monosépalo, con 3 divisiones; corola con 6 pétalos di^tintos en 2 series, cuyos 3 esteriores mayores, son espesos, mientras los 3 inte- riores son de ordinario mas pequeños y mas delgados ; estambres de filamento muy corto, con un conectivo que se prolonga mas allá de las celdas de las anteras, largas y estrorsas. Muchísimos ovarios uni- loculares y üniovulados, terminados por un estigma sésil y obtuso. Baya mas ó menos gruesa, de forma variada, lisa, rugosa, escamo- sa ó tuberculada, formada de muchísimos carpidlos reunidos en un sincarpio carnudo ; semillas de epispermo como crustáceo, con un endospermo ruminado, conteniendo un embrión pequeño situado por el ápice : anona, F. 95, T. I. 901 . Estambres monadelfos ó diadelfos, 902. — Estambres polia- delfos, Tñ. 902. Siempre monadelfos, 903. — Diadelfos siempre, 973. 903. En número siempre definido, 858. — En número indefinido, mas ó menos numerosos, 951. 904. De 3 hasta 5, 905. — De 5 hasta 12, 20 ó muchos, 912. 905. Tres estambres, 906. — Cinco estambres, 907. 906. xlrbustos sarmentosos ó bejucos, mas ó menos altos y ramo- sos, con hojas simples, opuestas, pecioladas, lampiñas, elípticas, oblongas, eliptical-oblongas ú oval-oblongas, aserraditas ó enteras y acompañadas de dos estípulas. Flores en panojas ó en cimas dicó- tomas, pedunculadas, de cáliz 5-fido persistente y pequeño ; corola con 5 pétalos ; estambres transversalmente dehiscentes y de celdi- llas confluentes, insertos en la parte interna de un disco grande, á veces cupuliforme. Ovario trígono, trilocular, con óvulos ascenden- tes y definidos, de cuyo ápice sale un estilo trífido terminado por tantos estigmas cabezudos. Fruto formado de carpidios estriados, coriáceos, navicular-comprimidos, medianícido-bivalvés , con 4, 6 semillas pegadas por la base ordinariamente á favor de un ala. Ilip- pocratea. 907. Columna ó andróforo pegado por su parte superior á los pé- talos por medio de glándulas ; anteras solitarias insertas entre los lóbulos de la columna, 908. — Columna ó andróforo de vértice libre-, pentandro y sin lóbulos estériles, anteras opuestas á los pétalos, 909. 908. Arbustos sarmentosos ramosísimos, que se elevan hasta 20' VEJETALES HEKMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 365 y mas de altura, aguijonosos y algunas veces inermes, con el tallo y las ramitas angulosos ó cilindricos; hojas simples, alternas, pecio- ladas, mas ó menos tiesas, lineares, lanceolado-lineares, ó asaz grandes y acorazonado-aovadas, mucronadas ó con una punta, ente- ras ó con algunos dientes. Flores pequeñas, en grupos axilares ó la- terales hacia el vértice de las ramitas y de ordinario colgantes, te- ñidas de rojizo, de cáliz 5-partido, coloradito, cuyos segmentos son mas largos que la corola, lanceolados ; corola de 5 pétalos subsesiles ó cortamente unguiculados y de cuyo ápice sale un apéndice estre- cho, pegados á los lóbulos estériles de la columna por la márjen del limbo ; columna 5-loba, anteras subsesiles en los senos entre los ló- bulos. Ovario 5-locular, mas ó menos esférico y erizadito ó glandu- loso, con 2 huevecillos en cada celda, cuyo superior es ascendente, mientras el inferior está colgante; e^tilo simple terminado por un estigma de 5 lóbulos globosos. Cápsula pentácoca , erizada, cuyos carpidios monospermos se abren á lo largo del lado interno; em- brión derecho contenido en un endospermo; cotiledones convolutos, foliáceos y bílobos : buettneria, F. 104, T. 11. 909. Cáliz provisto de un involucro lateral formado de 3 ho- juelitas caducas : ovario formado de un carpelo solitario, con un es- tilo simple, lijeramente lateral y terminado por un estigma de or- dinario apincelado, caja ó carpidlo bivalvado y monospermo, 910. — Cáliz sin involucro alguno ó á veces con uno que acompaña á las flores y es de 3 hojuelas persistentes; cápsula 5-locular con 5,10 semillas; hojas peninervias, 911. 910. Arbustilio ó mata de como 4 á 5' de altura, derecho, no muy ramoso, aterciopelado-tomentoso y blanquecino, ó alampiñado, con hojas aovadas, oblongas ó lanceolado-oblongas, plegadas, festonea- das ó dentadas, largas de 2"-5" sobre b-T" de ancho, pero cuya fi- gura varia mucho, así como la disposición y tamaño de los grupos florales estipulados. Flores fasciculadas en grupos de ordinario axi- lares, pedunculados ó sentados, amarillas ó blanquecinas y de cáliz 5-fido, lanudo ó lampiño, con los lóbulos subulados; corola con 5 pé- talos derechos é iguales; columna adherente á la base de las uñas de los pétalos, entera ó dividida en 5 filamentos : waltheria, F. 104, T. III. 911. Arbustitos, matas ó plantas herbáceas que se elevan á 4-5' de altura lo mas, mas ó menos ramosos y derechos, lampiños, pu- bescentes, peludos ó tomentosos, con hojas simples, alternas, pecio- ladas, estipuladas, oblongo-lanceoladas, oval-redondeadas, aovadas, aovado-oblongas, festoneado-aserradas, aserradas ó festoneadas so- lamente, á veces aserradas dos veces, de ápice obtuso ó terminado por una punta, lampiñas, tomentosas, peludas ó velludo-lanudas Flores fasciculadas sin involucro alguno, axilares ó tei'mi nales, otras veces en grupos espiciformes y ceñidas por un involucro de 3 ho- juelas ; cáliz 5-fido, ordinariamente mas corto que la corola, con los lóbulos lanceolado-aguzados, ovales con una punta, deltoídeos con una punta ó lanceolado-puntiagudos ; corola de 5 pétalos cuyas uñas están reunidas con la base de la columna dividida superiormente en 5 filamentos u entera, con anteras biloculares; estilos 5, distintos ó 366 MÉTODO DICOTÓMICO. reunidos por la base. Cápsula loculícida, con los tabiques coheren- tes, pero que por fin se separan del eje filiforme, ó septícida y lo- culícida; en fin otras veces está formada de 5 cocos : melochia, F 104, T.III. 912. En número variable, 913. — En número fijo y constante, 937. 913. Filamentos reunidos en una columna mas ó menos larga, 914. — Nunca formando columna, 924. 914. Columna muy larga y reunida con el carpóforo que contie- ne y que tiene el ovario casi junto á su ápice, terminado por 10 ó por muchos estambres, cuyos filamentos son monánteros, y cuyos esteriores son estériles, con anteras biloculares cuyas celdas están reunidas por los estremos. Carpidlos foliculares, ordinariamente torcidos en hélice y formando una especie de cápsula cónica, 915. — Columna no muy larga, atravesada por el estilo solamente, 916. 915. Arbustos que se elevan de 4-8-10-12 y hasta 15' de altura, bastante ramosos, furfuráceo- tomentosos ó tomentosos solamente, raras veces lampiños ó alampiñados, con hojas alternas, simples, mas ó menos pecioladas, acorazonadas , aovadas ó acorazonado- redondeaditás, con ó sin punta, festoneadas, aserradas, sinuado- dentadas ó á veces algo lobadas, de cara superior lampiña ó alam- piñada, mientras la inferior es aterciopelado-peluda ó peludo- tomentosa : acompañada la inserción del peciolo por dos estípulas. Flores blancas ó rojizas, ordinariam.ente fasciculadas y axilares ó en corimbos terminales: en el primer caso son mellizas en el ápice de un pedúnculo común, con el pedicelo envuelto por la base en una estípula envainadora caduca, de cáliz 5-fido, de ordinario bilabiado y campanudo; corola con 5 pétalos enderezados y casi aplicados al andróforo, mas largos que el cáliz j de base orejuda ó desnuda, or- dinariamente asimétricos. Ovario que aparece en el ápice de la co- lumna y de base envuelta en los filamentos, 5-locular, oval ú ovoi- deo, con algunos óvulos en cada celda, mas ó menos pubescente y de cuyo ápice sale un estilo quinqué-partido con estigmas sub-cabezu- dos. Fruto formado de 5 carpidiostorcidos en espíralo aveces rectos, por fin distintos, foliculares, abriéndose á lo largo de una línea ven- tral, polispermos y cuyas semillas son lampiñas : helicteres, F. 103, T. II. 916. Anteras uniloculares, 917. — Anteras biloculares, 920. 917. Columna dividida en 5 filamentos, cuyo ápice de cada uno lleva 2, 3 anteras; cáliz sin involucro; hojas palmeadas, 918. — Columna tubulosa cuya parte superior está cubierta esteriormente por las anteras lineares, "adnadas, contiguas y dispues tasen espiral, de ápice 5, 10-fido; cáliz acompañado de un involucro caduco y tri- filo, 919. 918. Árbol muy grande y muy corpulento, que se eleva á mas de 60' de altura, de tronco con aguijones cuando tierno, los cuales des- aparecen con la edad; con ramas gruesas estendidas horizontal- mente y dispuestas casi por grados, dándole un semblante particu- lar y característico. Hojas grandes, alternas, compuestas de 5, 7 hojuelas lanceoladas ú oblongo-lanceoladas, enteras ó dentaditas hacia la punta, pecioladas ó subsesiles, de tamaño bastante variable, VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 3 67 saliendo del ápice de un pedúnculo común muy largo. Flores en gru- pos saliendo primero que las hojas, en las ramitas tiernas, de una especie de tubérculo, en número de 10 á 15, cuyos pedúnculos, lar- gos de 10 á 12'", se van ensanchando por el ápice hasta desaparecer confundidos con la base del cáliz, algo grandecitas, tomentosas y amarillentas ó rosaditas esteriormente, de cáliz cortamente 5 -lobo, y á la vez unduloso, algo campanudo y largo de 6 8'"; corola de 5 pé- talos obaovados, lampiños interiormente, largos de como 20'", igua- lando á los órganos sexuales y abriéndose las anteras desde la parte mediana, anfractuosas y sostenidas por filamentos de vértice subu- lado; estilo terminado por 5, 6 divisiones, cada una con su estigma correspondiente, algo cabezudo y ensanchado. Cápsula 5-locular, loculícida, bastante gruesa, ovoidea ó casi globosa, del tamaño de un huevo de pava á lo mas, con muchas semillas algodonosas : erio- denclron, F. 103, T. I, G. II. 919. Árbol alto de 30 á 50', no muy corpulento, bastante ramoso superiormente, con hojas grandes, alternas, simples, acorazonadas por la base y aguzadas por el vértice, redondeadas, angulosas ó ape- nas 5, 'T-lobas, sub-enteras ó dentadas, de cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior espubescentita, largas de 10 á 12", sin el peciolo, que lo es de 6 á8" sobre 9 álF'de ancho, con dos estípulas caducaspor su inserción. Flores solitarias, grandes, terminales en las ramitas nuevas, derechas, amarillentas, y como acampanadas, de cáliz cortamente 5-lobo, de cuyos lóbulos desiguales dos son puntiagudos ó imbricativos por la base, mientras los tres otros, redondeados y bastante grandes, son induplicativos, largo de 2 li2 á 3", pubescen- te interiormente, como sedoso y amarillento; corola de 5 pétalos largos de 4-5"-6" y anchos de 15-20'", con uñas oblongo-lineares é iguales al cáliz, un poco mas larga que la columna, de cuyo ápice salen 5 estigmas lineares torcidos en espiral y formando así un cuer- po cilindrico. Cápsula 5-locular, polisperma, loculícida, cuyas mu- chas semillas, pequeñas, ovoideas, lustrosas y prietas, están envuel- tas en un algodón de color algo aleonado oscuro, larga de 8-10 y hasta 12" sobre como 2" de ancho por la base, es cilíndrico-pentágo- na, y cónica : ochroma, F. 103, T. I, G. ÍII. 920. Columna libre de los pétalos, 10 fida, de cuyas divisiones las unas son estériles y las demás fértiles, 921. — Columna soldada con la base de los pétalos, filiforme, apenas 5-loba por el ápice, con 10- 15 anteras sentadas en el dorso, cuyas celdillas ovoideas están uni- das por los estremos. Árbol de 25-35' y hasta 50' de altura, cuyos ramos ó vastagos son muy derechos, con hojas simples, alternas, cortamente pecioladas, enteras, lampiñas y con 2 estípulas muy pe- queñas. Flores en racimillos cortos, axilares ó laterales, peduncu- lados, pedicelos 1-floros casi del largo de los peciolos; cáliz dentado ú operculado, ovoideo y por fin apeonzado, reventándose irregular- mente, de manera que el tubo se queda partido en algunos lóbulos desiguales, casi tan largos como los órganos sexuales; corola con 5 pétalos oblongo-espatulados, mas largos que el cáliz, blancos y lije- ramente estriados á la derecha. Ovario sentado, 2, 3-locular, cuyas celdillas son biovuladas, de cuyo ápice sale un estilo filiforme, bífi- 368 MÉTODO DICOTÓMICO. do, terminándose por estigmas su"b-cabezudos. Pericarpio ó fruto leñoso j como coriáceo á la par, indehiscente, de ordinario unilo- cular y monospermo : myroilia, F. 103, T. I, G. IV. 921. Cáliz 3, 2, 4-partido; lóbulos fértiles de la columna, con 3 anteras; especie de nuez tuberculosa, 5-locular y de celdas polit-per- mas, 922, — Cáliz siempre 5-pariido j colorido ; lóbulos fértiles de la columna bianteríferos. Baya grande, corticosa, 5-locular, pulposa y polisperma, 923. 922. Arboles bastante frondosos, que se elevan á 25-40 y hasta 50' de altura , ramitas pubescentes, con vello dispuesto en estrella ó pulverulento-rojizas y alampiñadas; hojas simples, alternas ó dís- ticas, pecioladas, aserradas, ordinariamente de base oblicua, oblon- go-lanceoladas ó aovadas, aguzadas ó con una punta, de base semi- acorazonada, ásperas ó alampiñadas y otras veces lampiñas por la cara superior, mientras la inferior es pubescente y de ordinario blanca ó pulverulenta cuando tiernas. Flores pequeñas amarillen- tas, fragrantés, en corimbos ordinariamente axilares en el vértice de las ramitas nuevas; de corola con 5 pétalos largos de 1 li2'", de limbo cuculiforme, con un apéndice terminal, linear, bífido y tan largo como él. Ovario mas ó menos globoso, 5-locular, con mu- chos óvulos en cada celda, de cuyo ápice salen 5 estilos contiguos, cada cual con su correspondiente estigma, un poco cabezudo. Fruto sub -drupáceo, purpúreo -negrusco, largo de 12-8'" sobre 9-6'" de diámetro, ó globoso ^ con 5 surcos lonjitudinales, cuyas semillas contienen un embrión encorvado en un endospermo delgado: gua- mma, F. 104, T. I, G. I. 923. Árbol de 25 á 30' de altura, bastante ramoso, con hojas sim- ples, alternas, pecioladas, muy grandes, enteras, oblongas, aguza- das, lampiñas, largas de 6, 8", 10" sobre 3á4" de ancho. Flores peque- ñas fasciculadas ó solitarias, caulinares ó rameales, otras veces la- terales, pediceladas y de cáliz 5-partido coloradito ó rosadito, con los segmentos lanceolados, aguzados y un poco mas largos que la colora amarillenta; corola de 5 pétalos, cuyo limbo acogollado se termina por un apéndice espatulado; lóbulos fértiles de la columna opuestos á los pétalos y cargando con dos anteras cada uno. Ovario único oval, 5-locular, cuyas celdas contienen muchos huevecillos y de cuyo ápice sale un estilo simple 5-fido, con tantos estigmas cabe- zuditos. Fruto abayado bastante grande, indehiscente, amarillo ó rojo-moradusco, coriáceo oval-oblongo, ó quizás mejor como fusi- forme, de superficie desigual abollada, con 10 surcos lonjitudinales, cuyas 5 celdas contienen muchas semillas y pulpa, largo de 6-8-10" sobre como 3 á 4" de diámetro por la parte media ; embrión sin en- dospermo, con los cotiledones gruesos, mantecosos y arrugados : theobroma, F. 104, T. I, G. II. 924. Pero sí reunidos en tubo los filamentos, 925. — Nunca for- mando tubo y mas ó menos soldados por la base ; una legumbre, 933. 925. Fruto abayado , 926. — Fruto capsular, 928. 926. Sépalos 7, de los cuales 2 son esteriores y menores; tubo es- taminal desnudo, 927. — Sépalos 3, distintos, imbricativos y per- VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 369 sistentes, iguales; tubo estaminal cerrado esteriormente por 5 esca- mas petaloídeas alternando con los pétalos, 936. 927. Árbol bajito, de 10 á 15' de altura, con hojas esparcidas, enteras, coriáceas, cortamente pecioladas, eliptical-oblongas, re- dondeadas por la base, y de ápice puntiagudo ú obtuso, largas de 2- 3" sobre 1-1{2 de ancho, con el peciolo ensanchado por el ápice. Flores en corimbos axilares, ó por fin laterales, encojidos, apenas mas largos que el peciolo, de cáliz con 3 sépalos distintos, imbrica- tivos, persistentes, largos de V" , anchamente redondeados, diminu- tamente pestañosos, mitad mas cortos que los pétalos derechos, ob- aovado-oblongos, carnudos, 5 ó 4 é imbricativos; tubo estaminal algo mas cortito que la corola, ceñido esteriormente por 5 escamas petaloídeas, hipojínicas j alternas con los pétalos; 10, 20 anteras contiguas, abriéndose por dos rajaduras lonjitudinales y situadas en . la parte esterior y superior del tubo. Ovario unilocular con 4, 5 pla- centas narietales y lonjitudinales, llevando muchos huevecillos ho- rizontales, campilótropos, proviíitos dedos tegumentos y dispuestos en algunas series: del ápice sale un estilo corto, terminándose ai 4, 5 estigmas globulosos y contiguos. Baya globoso-ovoídea, llena por las placentas que por fin envuelven enteramente las semillas ovoideas, brunas, lustrosas, largas de 1'", muchas, de testa crustá- cea, con endospermo carnudo y aceitoso, 3 veces mas largo que el embrión ; larga de 3-6'" sobre 4-6'" de diámetro, sostenida por el cáliz abierto y coronada por los estigmas persistentes: cmnamoden- dron, F. canelláceas. 928. Cápsula muy gruesa, de pericarpio algo carnudo, pero que se vuelve seco y al fin se abre por 4, 5 valvas ; semillas gruest\s y sin arilo alguno, 929. — Cápsula nunca de pericarpio carnoso, pe- queña, loculícida y cuyas semillas están cubiertas de un arilo pul- poso, 930. 929. Primoroso árbol que se eleva á 45-50' y mas de altura, muy frondoso y corpulento, con hojas pinadas, largas de 18 á 24", com- puestas de 8, 10, 6 pares de hojuelas coriáceas, elíptico-lanceoladas, con una puntita, lampiñas, opuestas, cortamente pecioladas, un poco desiguales, las inferiores siendo algo menores, largas de 3-4 l[2-6- 9-11" sobre 2-3-3 1[2" de ancho, con el raquis grueso, cilindrico y largo de 15"; peciolos gruesos de 3 á 4'" de largo. Flores pequeñas, blanquecinas, en panojas arracimadas, axilares ó terminales, fen grupos paucíñoros, pedanculados ó cimas pequeñas esparcidas á lo largo de los brazos, largos de 8 á LT'; cáliz con 4, 5 sépalos distin- tos, cóncavos y mas cortos que la corola, con 4 hasta 15 pétalos co- riáceos, aovado-oblongos, torcidos y abiertos ; tubo estaminal 8, 10-festoneado, con tantas anteras sentadas interiormente y alter- nando con los festones. Ovario 4, 5-locular, con 4 óvulos biseriados en cada celda, sentado en un disco bastante espeso y llevando en el ápice un estilo corto terminado por un estigma ancho, discoideo ó troncado y asurcado por la circunferencia. Cápsula globosa, de vér- tice algo puntiagudo, cu3^o diámetro es de 3 á 5", como corticosa, algunas veces con gotas de goma blanquecina en su superficie lam- TOMO I 24 370 MÉTODO DICOTÓMICO. pifia T de un color gris algo sucio; semillas gruesas, angulosas v oleajinosas : car apa, F. 117, T. II, G. IV\ 930. Corola de pétalos aovado-oblongos é imbricatívos ; tubo es- taminal 10, 8-partido, cuyos segmentos subulado-oblongos y obtusos llevan cada cual una antera terminal j ovoidea, 931. — Corola de pétalos valvares adheridos por la base ó distintos; tubo estaminal entero, con 8, 10 dientes y filamentos muy conos inserios entre los dientes, con anteras terminales subuladas y lampiñas, 932. 931. Arboles bajitos que se elevan á 20-25' de altara, muy ramo- sos, con hojas ordinariamente impari pinadas, formadas de 5, 10, 7 pares de hojuelas bien enteras, elípticas, oblongo-lanceoladas ú aovado-oblongas, lampiñas, desiguales y cuyas inferiores son meno- res. Flores en panojas arracimadas, axilares, pedunculadas, pubes- centitas, 2, 4 veces mas cortas que la hoja, con pocas divisiones ó brazos 10-paucífloros ó con 11, 3 ñores, de cáliz 5, 4-fido; corola de pétalos blanquecinos ó verdoso-amarillos, lampiños y largos de 1-2'"'; tubo estaminal corto y peludo, interiormente. Capsula sub- gjjobosa con 5-6'" de diámetro, cuyas semillas ovoideas están cu- biertas de un arilo rojo : trichilia, F. 117, T. II, G. I. 932. Árbol bajito que alcanza á 20-30' de altura, á veces bastante corpulento, muy fragranté y resinoso, bastante ramo.^o y coposo, con hojas pinadas formadas de 9, 3 hojuelas eliptical-oblongas, bien enteras, largas de 4-3" y anchas de 2-1", sea alternas con la termi- nal á veces abortiva, ó en el mismo raquis opuestas é imparipina- das, lampiñas. Flores en panojas axilares, flojas, racemiformes, pubescentitas, con las divisiones acorimbadas y cortamente pedun- culadas; cáliz 4, 5-dentado ; corola.de pétalos amarillento-blancos. Ovario 3-locular, de celdillas con 2 óvulos colaterales. Cápsula glo- bosa : mosclioxylmn , F. 117, T. II, G. III. 933. Cáliz encerrado en una vaina bracteolar de ordinario bífida; legumbre comprimida polisperma y estipitada, 934. — Cáliz ente- ramente desnudo; legumbre leñoso-coriácea, oblonga, monosperma por causa de aborto, 935. 934. Arboles de ordinario bajitos, que se elevan á 25 ó 30' de al- tura, pero algunos alcanzan hasta 45 y 50', muy ramosos y copo:?os, no muy corpulentos, de hojas alternas, paripinadas y compuestas de 2, 4, 6 y mas pares de hojuelas elípticas, eliptical-oblongas ó lan- ceolado-oblongas, cuspidadas, de base redondeada, sub-acorazonada ó*&ub-aguzada, lustro&as, lampiñas y como papiráceas. Flores gran- des, ordinariamente color carmesí, fasciculadas ó en racimos gran- des y colgantes, mas ó menos pediceladas, con brácteas grandes y caducas, de cáliz colorido 4, 5-ñdo; corola con 5 pétalos iguales mas cortos ó mas larguitos que los estambres en número de 11, 10 y á veces 15, insertos en el vértice del tubo calizinal. Ovario ebtipitado V cuyo ginóforo está adherido con el tubo del cáliz: brow7iea, F. 130, S,-F. 5 T. IV, G. III. vó^. Árbol que se eleva hasta 50' ó GO' de altura, bastante coposo y asaz corpulento, con hojas paripinadas, alternas, compuestas de 4, 3 pares de hojuelas oblongas, lampiñas, largas de 8-5" y obtusas. Flores en espigas densas y elongadas, compuestas por la base y VEJETALES HER.MAFRODITOS POLIPÉTALOS. 311 como arracimadas, largas de 6-10" y formadas de grupos de flores, cuj'o cáliz campanudo es 5, 6-dentado : corola con 5, 6 pétalo^ igua- les, obao vados, pcí^tañosos, largos de 2'", dos veces mas que el cáliz; estambres 10, 12. alternativamente estériles y cubiertos de vello de- ciduo, esertos : mora, F. 130, S.-F. 2, T. V, G. IV. 936. Árbol grande que se eleva á 90-100' de altura, muy coposo y bastante corpulento, con hojas simples alternas, cortamente pe- cioladas, lanceoladas ó lanceolado-elípticas, peninervias y con ve- nas delicadas, de vértice con una punta obtusa y aguzadas por la base, lampiñas, de forma y tamaño muy variados ; yema globosa. Flores color de e;cariata, en cimas umbeliformes, ordinariamente 3, 9-fioras, pedicelos delgados y tan largos como las flores, de cáliz con 7 sépalos ; corola de 5 pétalos torcidos; estambres 15, 20, de tubo 5, 3-fido, con los lóbulos anteríferos rectos, anteras lineares estrorsas. Ovario sin líneas espirales, 5-locular, con dos ó algunos óvulos en cada celdilla; entilo cilindrico con 5 estigmas lanceolados y recorvados : moronobea, F. 96, T. IV. 937. Cuyos filamentos son soldados en tubo, 938. — Filamentos reunidos mas ó menos por la base , pero no formando tubo nunca, 944. 938. Fruto abayado ó drupáceo, 939. — Fruto capsular, 942. 939. Baya llenado pulpa jelatino^a; cáliz con 3 sépalos distintos, imbricativos; vejetal miuy aromático; hojas simples, 940. — Drupa pequeña amarillenta; cáliz 5-partido ; yejetal no aromático, hojas bipinadas, 941. 940. Árbol de 50' de altura, ó arbolito de 10-15', con hojas siem- pre verdes esparcidas, coriáceas, enteras, lampiñas y lustrosas, es- patuladas, redondeadas por el ápice y de base aguzada hasta vol- verse peciolo corto, de cara inferior mas pálida, largas de 2-3" y anchas de 1". Flores en corimbos terminales, cuyos pedicelos son mucho mas largos que ellas, moradas y con las anteras amarillas, de cáliz pertir-tente, con los sépalos largos de 1'", anchamente re- dondos, diminutamente pestañosos; corola con 5, 4 pétalos carnu- dos, imbricativos, erguidos, obaovado-oblongos y mitad mas largos que el cáliz; tubo estaminal sin escamas esteriores, con 10 anteras contiguas en la parte superior y exterior, abriéndose por dos raja- duras lonjitudinales desde su ápice y alcanzando hasta la parte me- dia: iguala al estilo incluso y es un poco mas corto que la corola. Ovario con 2 ó 3 placentas parietales, puntiformes, situadas debajo del medio de la pared, llevando cada una dos óvulos colaterales, campilótroposy ascendentes, aunque sostenidos por un funículo col- gante; estilo corto terminándose en 2, 3 estigmas globulosos y con- tiguos. Bava negra, globosa, con 4'" de diámetro, conteniendo po- cas semillas, de testa crustácea, negras, lustrosas, orbiculares, anchas de 2'" y convexas por ambos lados, cuyo tegumento interior adhiere á un endospermo carnudo mitad mas largo que el embrión que contiene y cuya radícula corta es inferior : canella, F. cane- Uáceas, 941. Árbol bajito que se eleva á 25' de altura, no muy ramoso, de ramos largos y medio desnudos, cuyo tronco tiene como 4 á G" 372 MÉTODO DICOTÓMICO. de diámetro lo mas, muy primoroso cuando es todavía arbusto; ho- jas alternas bipinadas bastante grandes, lampiñas y de un hermoso verde oscuro, con hojuelas aovado-lanceoladas ó lanceoladas, agu- zadas, profundamente aserradas por debajo de la punta. Primorosas flores azules disciplinadas, en cimas apanojadas axilares ó termina- les, de cáliz 5-partido; corola de 5 pétalos oblongo-lineares, convo- lutivo-imbricativos; tubo estaminal 20, 30-dentadoy con 10 anteras sentadas en su garganta. Ovario 5-locular, con óvulos sobrepuestos, inferior, fértil. Drupa amarilla globosa, muy poco carnuda, larga- mente pedunculada, lar^'a.de 4-6'" sobre 4'" de ancho: melia,¥. in,T. I. 942. Tubo estaminal entero, 10-dentado, con las anteras insertas interiormente entre los dientes: cápsula abriéndose desde la base, 943. — Tubo estaminal enteramente confundido con el ginóforo, de cuyo ápice salen 5 filamentos largos y fértiles. Árbol alto que se eleva á 50 ó 70' y mas de altura, muy coposo y muy corpulento, con hojas alternas, imparipinadas y compuestas de 8, 5 pares de hojuelas oblongas, oblicuas por la base, muy variables, tan pronto mas an- chas como mas estrechas, corta ó largamente pecioladas, enteras, lampiñas. Flores en panojas grandes pendientes, con frecuencia lar- gas de como 1', pediceladas, amarillo-pálidas y de cáliz 5-lobo; co- rola de 5 pétalos imbricativos, oblongos, pubescentes, cuysi costilla está por la cara interna provista de un pliegue que adhiere con el ginóforo. Ovario 5-locular, y cada celda contiene 8, 12 óvulos. Cáp- sula ovoídeo-sub-costilluda; semillas con un ala terminal y conte- niendo un endospermo delgado : cedrela, F. 118, G. II. 943. Árbol alto de 50' á 70', muy frondoso y corpulento, con ho- jas alternas paripinadas, lampiñas, compuestas de 6, 10 hojuelas, inequilaterales, aovadas ó aovado-lanceoladas, con una punta, de ordinario largas de 2" sobre 1-1 1|2 de ancho. Flores en panojas axilares, cuyos pedúnculos llevan cimas acorimbadas, de cáliz 5- fido; corola de 5 pétalos torcidos; ovario 5-locular, cuyas celdas contienen cada una como unos 12 óvulos. Cápsula leñosa larga de 3-4", cuyas valvas se abren por la base, quedándose pegadas por el vértice, de semillas con endospermo y provistas esteriormente de un ala terminal oblonga: sweitenia, F. 118, G. I. 944. Fruto seco, capsular ó leguminoso, 945. — Fruto carnudo abayado ó drupáceo, 947. 945. Una cápsula, 946. — Una legumbre. Arbustos ó árboles ba- jitos muy ramosos, con mayor frecuencia aguijonosos, á veces iner- mes, de ramitas alampiñadas, tomentosas ó pubescentitas, con hojas simples alternas, pecioladas ó quizás mejor compuestas de dos ho- juelas ordinariamente reunidas por la márjen interna y formando una hoja bíloba de cara superior lampiña y lustrosa, mientras la inferior es alampiñada sobre las nervaduras, aterciopelada ó pubes- centita, con 9, 7, 11 nervaduras, bien pronunciadas. Flores en ra- cimos ó solitarias y opuestas á las hojas, bastante grandes, blancas, á veces teñidas de color de rosa, de cáliz monosépalo, con el tubo cilindrico y el limbo ligulado-espatiforme, raramente 5-partido, pero de ordinario entero ; corola de 5 pétalos bafctantes veces un- *- VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 373 güiculaclos j mas largos que el, cáliz; estambres 10, á veces distin- tos, todos fértiles, de los cuales algunos son estériles, insertos junto con los pétalos en el ápice del tubo calizinal. Ovario estipitado cuyo ginóforo es libre del cáliz, terminado por un estigma infundibular- lamelado ó cónico. Legumbre bivalve ó indeliiscente : hauhinia, F. 130, S.-F. 2, T. IV, G. I. 946. Bonitas plantas herbáceas, de ordinario anuales, á veces vivaces y con la raiz tuberculosa, y alguna que otra vez vejetales frutescentes, de hojas compuestas de 3 hojuelas saliendo horizonta- les del ápice de un pedúnculo largo, sésiles ó algo pecioladas, alter- nas, lampiñas ó pubescentitas y con dos estípulas situadas en la in- serción del peciolo común. Flores amarillas ó rosadas en cimas umbeliformes ó en racimos terminales paucítloros, de cáliz persis- tente 5-partido ó con 5 sépalos distintos; corola torcida y de 5 pé- talos; estambres 10, algo desiguales. Ovario ovoideo, mas ó menos cónico ó alargado, con 5 celdillas pluriovuladas, de cuyo ápice salen 5 estilos terminados cada uno por un estigma cabezudo ó apincelado. Cápsula 5-locular, loculícida, con 5 ángulos, polisperma, cuyas se- millas pequeñas, cubiertas de una testa carnosita ó especie de arilo, que se separa del tegumento interior ó lejítímo, contienen un em- brión dereclio, de cotiledones foliáceos y un endospermo del^'ado : oxalis, F. 262, G. I. 947. Fruto drupáceo, 948. — Baya redonda ó alargada y como fusiforme, pentágona, polisperma, 5-locular y muy acida. Arboles bajitos, muy ramosos superiormente, lampiños, con hojas alternas, imparipinadas, bastante grandes y de hojuelas opuestas, ovales. Flores caulinares ó ramales, en racimitos axilares ó en grupos, pe- dunculadas, rojizas y de cáliz monosépalo pequeño y 5-fido, con los segmentos un poco desiguales, lanceolados ú óvalo-lanceolados, ob- tusos ó puntiagudos; corola mucho mas grande que el cáliz, de 5 pétalos desiguales mas ó menos abiertos; estambres 10, desiguales, alternativamente mas laríxos v mas cortos. Ovario redondo ú oval, 5-locular, pluriovulado, de cuyo ápice salen 5 estilos de estigma oblicuo y como espatulado. Semillas negras, lustrosas, pequeñas y como Ientiformes : axerrhoa, F. 108, G. II. 948. Drupa con un hueso único, 949. — Drupa con 3 pirenas ó huesecitos encrestados por el dorso, muy rara vez con uno solo : ar- bustos ó raramente árbol bajito, muy ramosos, con hojas simples, opuestas, mas ó menos pecioladas, aovadas, elípticas, oblongas, lan- ceoladas ó aovado-lanceoladas, linear-lanceoladas, obtusas ó con una punta, mas ó menos coriáceas, enteramente lampiñas, ó de cara superior lampiña y lustrosa, mientras la inferior está provista de pelo en forma de huso, pegado por su medio y por consiguiente bi- cuspidado, muy punzante y cuya picadura abrasa, bien enteras ó dentadas: dos estípulas caducas acompañan á la inserción del pe- ciolo. Flores de ordinario rosadas, en umbelas ó corimbos axilares v mas rara vez solitarias ó mellizas, largamente pediceladas, de cáliz 5-fido con 10, 6 glándulas situadas esieiiormente por la base y cor- respondiendo mas ó menos con las divisiones; corola de 5 pétalos largamente unguiculados. Ovario casi esférico, de cuyo ápice salen 374 ■ MÉTODO DICUTÓ:\íICO. 3 estilos de ápice ganchudo j troncado : onalpigMa, F. 120, T. I, G. II. 949. Cáliz sin glándula situada esteriormente y por la base. Ar- boles bastante grandes, de los cuales algunos se elevan basta 40' y mas de altura, ó arbustos, con hojas opuestas, simples, mas ó menos pecioladas, obaovadas, ovales, elíptico-lanceoladas, mas ó menos coriáceas, enteramente lampiñas, del todo tomentosas ó de cara su- perior lampiña y lustrosa, mientras la inferior es alampiñada, pu- bescente ó tomentosa; dos estípulas persistentes. Flores las mas veces amarillas, en racimos terminales, y de cáliz 5-partido; corola con 5 pétalos de ordinario unguiculados; estambres 10, con las an- teras adlicridas. Ovario con 3 celdas 1-ovuladas, 3 estilos distintos puntiagudos. Drupa de hueso 3-locular, ordinariamente amarilla : iyrsonima, F. 120, T. I, G. I. 950. Arbolitos, arbustos ó frútices muy ramosos, alcrünas veces espinosos, cujas ramitas lampiñas ó provistas de escamitas llevan hojas simples, alternas, de ordinario membranáceas, algo coi'iáceas, caducas, lampiñas, mas ó menos pecioladas, bien enteras, obaovadas, ovales, elípticas ú obaovado-oblongas, largas de 1 á 3", de ápice redondo-entero, escotado ó con una punta; estípulas persistentes. Flores pequeñas blancas ó blanquecinas, mellizas ó amanojadas, axi- lares y precoces, raras veces solitarias, de cáliz 5-partido, persií>ten- te ; corola de 5 pétalos iguales, interiormente provistos de una es- cama doble, de estivacion imbricada; estambres 10, con anteras in- trorsas. Ovario 3, 1-lócular por cansa de aborto, de óvulo solitario colgante; 3 estilos distintos ó unidos por la base. Drupa pequeña, ordinariamente roja y lustrosa, cuj'a semilla está formada de un embrión recto en el eje de un endospermo cartilajinoso : trytliroxy'- lum, F. 119. 951. Filamentos reunidos formando una columna en el centro déla flor, 952. — Filamentos nunca reunidos en columna, pero formando un tubo dividido superiormente en muchos filamentos, con las anteras uniloculares é incumbentes. Arboles bajitos ó bastante altos y que se elevan algunos hasta 40-50' de altura, muy ramosos y asaz cor- pulentos, de hojas alternas, compuestas, palmeadas y con 5, 9, 7 hojuelas- eliptical-oblongas, obaovado-oblongas ó elíptico-lanceola- das, subsesiles, en el ápice de peciolo largo. Flores primorosas, grandes, blanquecinas ó rojas, solitarias, axilares y de cáliz troncado ó sinuoso, pequeño y aterciopelado, campanudo; corola muj' grande de 5 pétalos libres, caducos, lineares, largos de 6 á 8" y anchos de 6 á 8'", tomentosos. Ovario ovoideo, aterciopelado, 5-locular, polisper- mo, de cuyo ápice sale un entilo muy largo filiforme, terminado por un estigma 5-lobo. Cápsula gruesa, redonda ú ovoidea, 5-lccular, loculícida, con muchas semillas lampiñas y gruesas '.^achira, F. 103, T. I, G. V. 952. Fruto abayado, 953. — Fruto capsular seco, 956. 953. Hojas compuertas y dijitadas, baya corticosa muy gruesa, 954. — Hojas simples y punteadas; baya colorada y no gruesa, 955. 951. Hojas siempre compuestas; fruto que parece cap^ulai-, pero indehiscente y lleno de una pulpa farinácea. Árbol mas grande, mas VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 375 corpiüento y mas frondoso (|ue los demás vejetales conocidos, no muy alto sin embargo, con ramas muy gruesas, muy largas y hori- zontalmente estendidas. Hojas alternas con 5 á "7 hojuelas elípticas, algo aguzadas, lampiñas y en la punta de un peciolo bastante largo, cilindrico j pubescente. Flores solitarias, axilares, colgantes, blan- cas, con las anteras purpúreas, cuyo pedúnculo, largo de 4-6" y pu- bescente, está provisto de 2 brácteas lineares, j de cáliz ancho y con figura de copa, deciduo y de 5 divisiones ; corola de 5 pétalos reunidos entre sí casi hasta la parte media y seudo-monopétala, do- blados hacia arriba; muchísimos estambres en el ápice de un andró- foro muy largo. Ovario oval, 10-locular, con estilo filiforme mas largo que los estambres y terminado por 10 estigmas estrellados. Fruto grueso con 10 celdas polispermas, cuyas semillas, huesosas, son arriñonadas y desnudas en la pulpa : adansonia, F. 103, T. I, G. I.' 955. Arbustos ó arbolitos de hojas alternas, palmatinervias, esti- puladas," pecioladas, acorazonadas, mas largas que anchas, festo- neadas ó sub-enteras, algunas veces algo 3-lobas, con una punta por el ápice, alampiñadas, del todo lampiñas, ó de cara superior lam- piña, mientras la inferior tiene vello agrupado en las axilas de las venas; peciolo peludo, velludo ó pubescente. Flores pediceladas, axilares, rojas, y de cáliz 5 fido, ceñido por la base de un involucro con 7, 12 hojuelas lineares, enderezadas ó sub-derechas y casi igua- lando al cáliz, otras veces pestañudas abiertas ó reñejas por el ápice; corola de pétalos convolutos por la base y orejudos de un lado; co- lumna dos veces tan larga como la corola. Baya amarilla : malta- visms, F. 100, T. III, G. IV. 956. Fruto formado de algunas cajitas ó carpelos agrupados cir- cularmente en la base persistente del estilo ó del lecho, 957. — Una cápsula única; columna 5-dentada por el ápice, 968. 957. Base del cáliz envuelta en un calículo, 958. — Base del cáliz sin involúcelo alguno, 964. 95S. Tantos carpidlos cuantos estigmas cabezudos hay, ordina- riamente separándose por fin del eje central; columna anterífera por el ápice, 959. — Carpidlos monospermos mitad menos numerosos que los estigmas; columna de ordinario 5-dentada por el ápice, 961. 959. Carpidlos dehiscentes, 960. — Carpidlos indehiscentes, 20, 5, monospermos, corvos, ciñendo al lecho central y por fin separán- dose de él. Vejetales syb-leñosos, pubescentes, blanquecinos ó algo pinchudos, con hojas deltoídeas ó aovadas, aovado-lanceoladas ó romboídeo-lanceoladas, aserradas ó festoneado-aserradas por arriba de la base, estipuladas. Flores en espigas oblongas terminales ó axilares v reducidas, otras veces fasciculadas ó solitarias- axilares, cortamente pediceladas ; involucro con 3 hojuelas lanceoladas ó li- neares igualando al cáliz, ó por fin mas cortas que él ú obsoletas; cáliz de lóbulos aovados ó aovado-lanceolados, puntiagudos, tan lar- gos como el tubo ó un poco mas largos que él ; pétalos color anaran- jado ó amarillos obacorazonados y un poco es.ertos. Carpidlos sin arista, lampiños y pubescentes por el ápice inclinado, Uanos por el 376 MÉTODO DICOTÓMICO. dorso ó tricuspidados, peí i erizad os por arriba y con el dorso estria- do : malrastrum, F. 100, T. II, G. I. 960. Planta herbácea anual, pelierizada, de tallo delgado, ramo- sísimo, desparramado ó tendido por el suelo, con hojas alternas, pecioladas, palmatífidas y dentadas, estipuladas. Flores axilares, rojas, de pedicelos mas largos que los peciolos. Pétalos largos de 3'"; carpidlos 20, 14, bispermos, separándose los unos délos otros y del lecho central, pelierizados, con dos picos y abriéndose entre ellos; semillas separadas por un tabique transversal: estambres 10, 20; inyólucro de 3 hojuelas y persistente : modioJa, F. 100, T. II. 961. Carpidlos siempre indehiscentes, agarabatados y por fin se- parándose los unos de los otros; involucro 5-partido : hojas ordina- riamente provistas de 3 glándulas elípticas y rajadas situadas por la cara inferior en la base de las nervaduras, 962. — Carpidlos dehis- centes á lo largo de una línea dorsal ó indehiscentes, nunca agara- batados y por fin separándose los unos de los otros; involúcelo de 5-15 hojuelas distintas ó reunidas; hojas sin glándula alguna, 963. 962. Vejetales sub-leñosos ó arbustillos muy ramosos, altos de 3 á 5', con las ramas delgadas, largas y algo estendidas, de hojas al- ternas, pecioladas, palmatinervias tan pronto trífidas como algo lo- badas ó enteras, otras veces 5, 3-lobas, color verde mar y pubes- centes á la par por la cara inferior; lóbulos aovados ú oblongos, diminutamente aserrados, otras veces romboideos, contraidos por la base y desigualmente aserrados, con estípulas lineares y pronto caducas. Flores sub-solitarias, axilares rosadas bastante grandes; corola de pétalos tres veces mas largos que el cáliz y de 6-8'". Seg- mentos del involúcelo igualando al cáliz mas ó menos ó exactamente. Carpidlos pubescentes, tomentosos ó pelierizados : urena, F. 100, T. III, Ct. i. 963. Arbustos ó vejetales sub-leñosos, muy ramosos, de hojas al- ternas, pecioladas, acorazonado-redondeadas , oblongo-elípticas, elíptico-lanceoladas, acorazonadas, sub-cordiformes ú ovales, mas ó menos aserradas ó festoneado-aserradas, lampiñas del todo ó so- lamente por la cara superior, ó con vello esparcido y estrellado, punteadas ó no, estipuladas. Flores aglomeradas ó fasciculadas y cuyos glomérulos ó fascículos axilares son acompañados de un invo- lucro, ó en fin racimosas ó corimbosas, pedunculadas y de ordinario amarillas; cáliz de ordinario mas corto que el involúcelo y raras veces igualándole ; corola seudo-monopétala, con 5 pétalos mas ó menos grandes y por consiguiente mucho mas largos que el cáliz. Carpidlos lampiños aristados ó espinosos por el vértice ó sin aristas ni espinas tampoco \ patonia, F. 100, T. II, G. III. 964. Sin involúcelo ni involucro común tampoco, 965. — Sin in- volúcelo acompañando á la base del cáliz, pero con un involucro de 3 hojuelas acorazonadas ó alesnadas, de ordinario con una mancha blanca por la base y situadas en el pedúnculo corto de los gloméru- los paucífloros. Plantas herbáceas ó s'ub-leñosas, muy ramosas, de las cuales algunas se elevan hasta 5 y 6' de altura, pero por lo co- mún de 2 á 3' solamente, de ordinario pelierizadas, cuyo pelo blanco y tieso es á veces punzante ; hojas alternas, pecioladas. punteadas, VEJETALES HERM AFRODITOS POLIPÉTALOS. 377 frecuentemente palmatílobas, redoncleaditas, lobuladas ó enteras, aovadas obtusitas y aserrado-dentadas, otras veces 3-fidas de los lóbulos oblongos y puntiagudos con estípulas cerdáoeas. Flores ama- rillas, blancas á veces teñidas de purpúreo, en glomérulos axilares, paucífloros. pedunculados, pedieeladas ó sub-sentadas, y de cáliz 5- ñdo ó 5-partido. y dos á 3 veces mas corto que la corola, estilo 10- fido ; carpidlos 5 por fin separados los unos de los otros, alampiña- dos, lampiños, pubescentitos ó velludos, mas cortos, mas largos que el cáliz ó igualándole : malachra, F. 100, T. III, G. II. 965. Carpidlos monospermos, 966. — Carpidlos con 3, 9 semillas, dehiscentes superiormente por la sutura ventral ó á la par por la línea dorsal, por encima de la base ó por ella. Arbustitos, arbustos ó vejetales sub-leñosos, pubescentes, alampiñados, aterciopelado- tomentosos ó aterciopelados solamente, con hojas cordiformes, aco- razonado-redondeaditas ó redondeadas, bien enteras, festoneadas ó rara vez desigualmente dentadas ó sub-trílobas, del todo pubescen- tes, ó alampiñadas, de ordinario con una punta, pecloladas v esti- puladas. Flores de ordinario amarillas y algunas raras veces ro&adas ó blancas, en panojas terminales, en racimos ó corimbos axilares, otras veces sub-solitarias, de pedicelo articulado hacia el ápice ó por debajo de él ; otra vez hacíala parte media mas ó menos largo ; cáliz .5-ñdo ó 5-partido, de ordinario dos veces mas corto que los pé- talos; estigmas 5; carpidlos 5, biarticulados y estrechados por un anillo calloso ó un tabique incompleto, no inflados : 5 ó 10 ni infla- dos ni contraidos tampoco, con dos picos, y 2, 3 semillas, dehis- centes entre los picos y según la línea dorsal, ó 12, 30 membraná- ceos, inflados, redondeados por el ápice, separándose tarde y bival- ves por la base, con 4, 5 ó 1 semilla por causa de aborto : ahutilon, F. 100, T. I,G. II. 966. Dehiscentes hacia el ápice ó indehiscentes , separándose tarde del lecho central, en número de 5, 15, 967. — Siempre inde- hiscentes, deprimidos, con el pico ó el ápice puntiagudo por la parte interna. Planta herbácea anual peluda ó alampiñada, muy ramosa, con los ramos inferiores estendidos por la base y de vértice ascen- dente, con hojas alternas, pecioladas largamente, alabardadas ó lo- badas por la base, largas de 2 1/2-3 1/2", estípulas bastante grandes. Flores morado-azuladitas, axilares, solitarias, cuyos pedicelos son largos de 3-4"; cáliz profundamente 5-fido, con los segmento.^ aova- dos V puntiagudos, tres veces mas corto que la corola bastante grande : anacía, F. 100, T. II, G. II. 967. ArbustUlos ó vejetales de ordinario sub-leñosos y raras veces herbáceos, derechos, ramosos, pubescentes, alampiñados, pelu- dos, tomentosos y muy rara vez lampiños; hojas alternas, peciola- das, elíptico-lanceoladas, lanceoladas, ol)longas, aovadas, romboí- deo-lanceoladas, cordiformes, acorazonado-triangulares ó aovadas, mas ó menos aserradas, festoneado-aserradas, con una punta en el vértice, á veces aguzadas, pubescentes ó tomentosas 3^ aterciopela- das con estípulas. Flores de ordinario amarillas sub-solitarias ó fas- ciculadas, axilares, apanojadas ó racemosas, terminales ó axilares, con el pedicelo tan pronto articulado como sin articulación ; cáliz 378 MÉTODO DICOTÓMICO. 5-ficlo Ó 5-denfado, de tubo de ordinario anguloso, con 5 ó 10 ángu- los, á veces cilindrico ó sub-cilíndrico, por lo común mas corto que la coiola; carpidlos biarrejonados ó bipicndos, raras veces obtusos ó de>provittot. de aristas y de pico : sida, F. 100, T. I, G. I. S68. Involncelo mas ó menos caduco, 969. — Involúcelo siempre persistente, 971, 969. Caduco ó sub-persistente ; cápsula loculícida, 970. — Siem- pre caduco y de 3 hojuelas lanceoladas, igualando al cáliz; cápsula indeliiscente y coriácea. Arboles altos de 25 á 30', pero que algu- nas veces alcanzan hasta 50', bastante corpulentos entonces, muy frondosos, lampiños; hojas alternas, largamente pecioladas, coriá- ceas, acorazonadas, enteras, con una punta por el vértice, con dos estípulas pronto caducas, lanripiñas y lustrosas. Flores solitarias axilares, mas ó menos largamente peduncuiadas, amarillas algo te- ñidas de púrpura ó purpúreas grandes y primorosas, derechas ó col- gantes, de cáliz campanudo con 5 rejones y troncado; cor'ola cam- panuda grande, seudo-monopétala y 5-pétala. Cápsula globosa, con 5 celdas plurispermas, cuyas semillas largas de A'" , trigonal-obao- vadas, estriadas y alampiñadas, pero velludas por la base y los án- gulos : tlíespesia, F. 100, T. IV, G. V. 970. Vejetales herbáceos y sub-leñosos, pelierizados ó peludos, con hoias alternas, pecioladas, alabardadas é irreo'ularmente den- tadas ó 5-lobas é irregularmente aberradas. Flores solitarias, axila- res, grandes, peduncuiadas, de cáliz espatiformes, cuya base está acompañada de un involúcelo con 6, 10, 9, 22 divisiones mas cortas que el cáliz y lineares; corola amarilla dos ó tres veces mas larga que el cáliz. Cápsula alargada 5-locular, loculícida, cuyas celdillas contienen muchas semillas lampiñas y estriadas ó peludo-sub-es- triadas : ahelmosclius, F. 100, T. IV, G. I. 971. Cáliz 5-fido ceñido por un involúcelo con 7 á 12 divisiones mas ó menos lineares, 972. — Cáliz cortamente 5-dentado, mas corto que el involúcelo tripartido y cuyas divisiones foliáceas acorazona- das y muy grandes, aguzadas, undulosas por los bordes que se jun- tan, hacen parecer el cáliz como triangular y alcanzan hasta la mi- tad de la corola. Arbustos ó plantas herbáceas alguna vez, con hojas alternas, pecioladas, grandes, acorazonadas, 3 á 5-lobuladas, con estípulas caducas, lanceolado-alesnadas, largas de 1". Flores ama- rillas ó volviéndose algo purpurinas, en racimos ó cimas paucífloros en el vértice de ramitas axilares, peduncuiadas, de cáliz campanudo 5-dentado y abierto ; corola grande. Cápsula 3, 5-loeular, loculícida por el ápice, cuyas semillas, bastante gruesas y verduscas, llevan algodón : gossypium, F. 100, T. IV, G. III. 972. Cáliz siempre 5-fido, cuyo involucro es 8, 10-íido ú 8, 10- dentado, 972 Ms. — Cáliz 5-fido ó 5-dentado, cuyo involucro es formado de hojuelas distintas, simples, ensanchadas ó no por el ápice. Arbustos ordinariamente, ó aveces arbolitos y plantas her- báceas, pubescentes, aterciopelados, escabrosos, aguijonosos y lam- piños, muy ramofcos, de hojas simples, alternas, largamente pecio- ladas, acorazonadas, mas ó menos lobuladas y á la par festoneadas, aserradas ó ni el uno ni el otro. Flores bastante o:randes v de ordi- VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 379 nario hermosas coloradas, rosadas, amarillas, color carmesí, etc., axilares, pedunculadas, solitarias y de cáliz mas ó menos aplicado á la cápsula, algunas veces ventrudo y basta carnudo ; corola seudo- monopétala grande, con 5 pétalos iguales. Cápsula 5-locular, Iccu- lícida, con las celdillas conteniendo algunas semillas lanij)iñas, á veces pubescentes y hasta algo algodonosas : liibücus, F. 100. T. IV, G. III. 972 lis. Arboles bajitos que se elevan á 15-25', ó arbustos gran- des, con hojas alternas, pecioladas, bastante grandes, acorazonado- redondeadas, mas ó m.enos cuspidadas, bien enteras ó apenas festo- neadas, de cara superior lampiña y lustrosa, mientras la inferior es pubescente, con 1 ó 3 de las nervaduras glandulosas por la base ; estípulas anchas y deciduas. Flores amarillas y cuyo color es cam- biante y que varia del amaiillo pálido al anaranjado y hasta al rojo bastante subido, teiminales y axilares cuyos pedúnculos son I, 3- fioros ; cáliz 5-fido, envuelta la base por un involúcelo 8, lO-fido ú 8, 10-dentado, largo de 6 á 12'", mientras el cáliz lo es de 10, 18, 24'" ; corola grande con los pétalos largos de 2-2 l|2"-4". Estilo grueso y pubescente por el vértice, cortamente 5-íido, con los estig- mas dilatados. Cápsula 5-locular, locuiícida, cuyas celdas plurisper- mas, son divididas lonjitudinalmente por tabiques falsos, incompletos y que se separan en dos membranas cuando Be abre : paritium, F. 100, T. lY, G. IV. 973. Estambres siempre diadelfos; cápsula comprimida, biloeii- lar, locuiícida, con semillas carunculadas, 974. — Estambres tan pronto diadelfos como monadelfos, 975. 974. Plantas herbáceas ó sub-leñosas, muy ramosas, derechas, estendidas ó desparramadas, altas de 6 á 12" alcanzando á veces hasta 3' ; hojas simples, alternas, sub-sentadas ó cortísimamente pecioladas, enteras y de ordinario lineares. Flores bonitas, peque- ñas, rosadas ó blancas, en racimos ó espigas terminales, cuyos pe- dicelos ordinariamente articulados llevan 3 bracteitas por ó hacia la baíG, irregulares, casi amaripotadas y de cáliz con 5 sépalos, cuyos 2 laterales y mayores son colorados; corola de 3 pétalos por causa de aborto, en parte adheridos, cuyo anterior ó C|uilla es diforme ó encrestado ó sin cresta, y en ese último caso adhiere con los ettam»- bres y con el pétalo superior por la base; estambres 8, 6, adheren- tes con la corola, de anteras uniloculares abriéndose por un poro terminal. Ovaiio pequeño ovoideo, 2-locular, de cuyo ápice sale un estilo simple mas ó menos largo, terminándose por un estigma hueco y bílobo, cuyo labio superior acogullado es barbudo por el ápice encorvado, otras veces es papiliforme. Semillas con una ca- rúncula bipartida de segmentos aplicados á la testa, diminuta ó dis- tinta de las semillas, tríloba y galeiforme; endospermo abundante : polygala, F. 107, G. I. 975. Estambres 8; fruto samaroídeo, 976. — Estambres 4; fruto globoso erizado, especie de nuececita ; arbusto formado de muchos tallos derechos, saliendo de una especie de cepa, pero que no tar- dan en doblarse por el vértice que lleva muchas ramitas que son ascendentes y erguidas, largos de 11|2 á 2', pubescentes, así como 380 MÉTODO DICOTÓMICO. las raniitas cuando tiernos. Hojas simples, altercas ó esparcidas, elíptico-lanceoladas, arrejonadas, largas de 4-'7-10'", sin el peciolo tan largo como el limbo, y anchas de 1 1 j2-2'", espesitas, pubescen- tes por ambas caras, algo tiesas j tanto mas pequeñas cuanto se acercan mas del vértice de las ramitas en donde se vuelven bractei- formes para acompañar á las flores, algo purpúreas, axilares ó ar- racimadas, solitarias en el ápice de un pedúnculo casi horizontal, moradusco, largo de 1-1 li2'", con dos bracteitas opuestas situadas hacia su parte media, casi sésiles, lanceoladas, moraditas por la base; cáliz de 4 sépalos petaloídeos, convexos, pubescentes esterior- mente, moraduscos, casi iguales, óvalo-lanceolados, poco puntiagu- dos y de base casi redondita; corola de 5 pétalos mucho menores que los sépalos, desiguales, no simétricos, cuyos tres posteriores son ordinariamente reunidos por las uñas: estambres posteriores, de anteras adheridas al ápice del filamento y apenas distintas de él, abriéndose por dos poros. Ovario unilocular con dos óvulos mellizos colgantes de la parte superior y algo lateral de la celdilla, horizon- tal en el ápice del pedúnculo, algo ovoideo, velludo; estilo alesnado enderezándose pronto para llegar á la altura de los dos estambres maj'ores que le acompañan; se dobla un poco por el vértice y se termina por un est'gma bílobo y algo enderezado. Fruto globoso del tamaño de un guisante, moradusco, con muchas púas delgaditas, diverjentes y con la punta agarabatada : lirameria. F. 107, G. III. 9*76. Arbustos ó vejetales sarmentosos, á veces bastante altos, lampiños, con hojas simples, alternas, cortamente pecioladas, coriá- ceas, pequeñas, lampiñas y lustrosas por la cara superior, mientras la inferior es pubescentita ó alampiñada, ao vado-lanceoladas, ao- vadas ú oblongas, redondeaditas ú ovales, enteras, articuladas por la base y provistas de dos glándulas estipulares. Flores primorosas rosadas ó moraditas en racimos ó panojas axilares y terminales, de cáliz con 5 sépalos deciduos, cuyos dos laterales mayores y petaloí- deos forman alas; corola de 5 pétalos, cuyos dos laterales son esca- miforrnes, el anterior ó quilla bilobado, con un apéndice que se do- bla y se estiende por el dorso junto y entre los lóbulos. Anteras biloculares abriéndose por dos poros introrsos. Ovario unilocular por causa de aborto del carpelo anterior, oval, comprimido, cuyo ápice se prolonga un poco á manera de cresta muy poco desarrolla- da : en el lado opuesto á ella se percibe una línea poco marcada que parece el principio del estilo que sigue elevándose y se termina en un estigma crestado y verde : la parte opuesta al estilo se prolonga después de la fecundación con la cresta para formar un ala. Samara con una semilla sin carúncula ni endospermo tampoco : sec2iridaca, F. 107, G. II. 977. Arboles bajitos ó arbustos muy ramosos, espinosos frecuen- temente, con hojas alternas, coriáceas, lampiñas, lustrosas, com- puestas y ordinariamente unifolioladas, cuya hojuela grande se ar- ticula con el ápice del peciolo desnudo, marjinado ó alado, con puntitos ó glandulitas transparentes. Flores preciosas blancas, mas ó menos teñidas de rosado ó de púrpura, en grupos axilares ó ter- minales paucíñoros ; de cáliz acubileteado 5, 3-fido, con los lóbulos VEJETALES HERMAFRODITOS POLlPf.TALOS. 381 deciduos ; corola con 5, 8 pétalos, mucho mas largos que el cáliz, derechos ó algo doblados hacia fuera; bastante espesos j casi car- nudos, sin uñas, con glandulitas amarillentas transparentes, preflo- racion algo imbricada ; estambres muchos, de 20 á CO, insertos en un disco hipojínico bastante desarrollado, de anteras oblongas, ter- minales y basifijas. Ovario aovado ó esférico, plurilocular, con óvu- los biseriados, de cuyo ápice sale un estilo bastante grueso, cilin- drico, corto y terminándose en un estigma espeso, algo deprimido y esférico : el fruto es una hesperidia ó naranja mas ó menos gruesa, áe forma variando entre el esférico y el óvalo : de color mas ó me- nos amarillo, cuya concha contiene muchísimas glandulitas llenas de esencia, con 7, 9 celdas mono ó paucispermas, de paredes mem- branosas : citriis, F. 115, T. I. 978. Cáliz no adherente y ovario supero, 979. — Cáliz mas ó me- nos adherente y ovario mas ó menos infero, 1086. 979. Estambres libres, 980. — Estambres nunca libres pero sí mono, di ó poliadelfos, 1025. 980. En número definido mas ó menos constante, 981. — Indefi- nidos V muchos, 1023. 981. Cinco estambres ó menos, 982. — Mas de o estambres, 991. 982. Menos de 5 estambres, 983. — Cinco estambres, 986. 983. Siempre 4 estambres, 985. — De 3 á 4 estambres, 984. 984. De 3 estambres y algunas veces de 4; vejetales lechosos; fruto drupáceo, 275. — Siempre 3 estambres; vejetales nunca lecho- sos, fruto seco. Arbustos ó bejucos muy ramosos y á veces bastante altos; hojas simples, opuestas, pecioladas, lampiña?, elípticas, elip- tical-oblongas, oblongas ú oval-oblongas, bien enteras ó aserradi- tas, estipuladas. Flores amarillentas mas ó menos verduscas, en cimas ó panojas axilares mas cortas, iguales ó mas larguitas que las hojas, de brazos con bastante frecuencia dicótomos, herrumbroso- puinosos ó aterciopelados, otras veces peludo-aterciopelados ó lam- piños cargando á veces con pedicelos estériles mas ó menos nume- rosos y entremezclados con las flores pediceladas , de cáliz 5-fido; corola con 5 pétalos; estambres insertos por adentro de un disco grande cuyas anteras, transversalmente dehiscentes, tienen las cel- dillas confluentes. Ovario 3-locular, cuyos estilos son coherentes in- feriormente. de óvulos definidos, ascendentes, cuyo embrión no tiene endospermo. Fruto formado de carpidlos estriados, coriáceos, que por fin se separan , aquillado-comprimidos, medianícido-bival- ves, con las semillas pegadas por su base, ordinariamente por medio de un ala inferior y alargada : hippocratea, F. 123. 985. Arbustos bajitos, ramosos y con las ramitas tetrágonas, lampiñas y de hojas simples, opuestas ó verticiladas, cortamente pecioladas, obaovadas, ovales, oval-oblongas ó cspatuladas masó menos aserradas, del todo lampiñas ó de cara inferior pubescentita, coriáceas y estipuladas. Floies en cimas axilares, pedunculadas y mas cortas que las hojas; cáliz 4-partido; corola de 4 pétalos re- dondeados, planos y abiertos; estambres insertos por la márjen del disco en que está anidado el ovario, de 4 celdillas uniovuladas, de cuyo ápice sale un estilo corto terminado por un estigma 4-denta- 382 MÉTODO DICOTÓMICO. do ; í'i veces está coronado el ovario por 4 estigmas sésiles. Drupa colorada, pequeña, pisiforme, monosperma; semilla eaderezada, de testa membranosa j provista de un arilo diminuto : mygenda, F. 83, G. II. 986. Fruto drupáceo, 987. — Fruto capsular, 942. 987. Hojas compuestas, 988. — Hojas simples, 989. 988. Árbol de 15-40' de altura, ramoso, con hojas compuestas de 2, 3, 1 pares de hojuelas, oval-redondeaditas , de ápice escotado ó redondo, bien enteras, largamente pecioladas, lampiñas y largas de 1-1 1[2". Flores pequeñas, apanojadas, axilares, j de cáliz 5 partido ó 5-lobo ; corola con 5 pétalos; ovario unilocular , cuyo óvulo cuelga de un cordoncito central y ascendente: 3 estigmas subsesiles. Dru- pa ovoídeo-oblonga encarnada: rlms, F. 128, G. I. 989. Flores nunca polígamas ; todos los estambres fértiles ; árbol bajito, de ramas tortuosas y estendidas ó arbusto de hojas alternas, pecioladas,. trinervias, aovadc-sub-redondas, algo aserradas, con la cara inferior tomentosc-blanquecina, a>í como los peciolos, ramitas y flores ; espinas estipulares mellizas, cuya esterior e^^Xé. encorvada. Flores en corimbos axilares, de cáliz abierto, 5-fido, circunciso ha- cia la parte media del tubo después de la florescencia, y Ja parte que queda es sub-adherente con la base del fruto; disco glanduloso adherido al cáliz que lleva 5 pétalos insertos en él ; así como los es- tambres, pero mas interiormente. Estilos simples 2, 3. Drupa sub- globosa, lampiña, de hueso sin valvas, bilocular, 2-e>perrao, mas rara vez 1, 3 locular, y entonces 1, 3-espermo, con semillas sub- orbicuiares, comprimidas, no asurcadas y sin endosperrao : zizy- Vluis. F. 124, G. I. 990. Primorosos árboles que se elevan á 40-50' de altura, etc., 272. 9^1. En número de 8 ó de 10. Fruto capsular ó leguminoso, 992. — En número variable de 6 á 10. Fruto drupáceo, 994. 992. Siempre 8 estambres. Fruto capsular, 993. — Siempre 10 estambres, alguna rara vez menos por causa de aborto. Fruto legu- minoso ó capsular, 999. 993. Arbusto lampiño y ramoso, que se elev^a á como 15' de al- tura lo mas, pero de ordinario de 4 á 5' nada mas, con hojas alter- nas simples, algunas veces opuestas, pecioladas, elíptico-lanceola- das, con una punta, enteras ó á veces dentaditas, largas de 2-21/2" sobre 10-14'" de ancho. Flores blanco-amarillentas, en corimbos ter- minales, multífloros, muy olorosas, pequeñas, y de cáliz 4-partido sin apéndices; corola de 4 pétalos unguiculados, aovados, abiertos y mucho mas largos que las divisiones calizinales, insertos junto con los estambres salientes y dispuestos en 4 pares, de anteras redon- deaditas. Ovario 4, 3-locular ovoideo, poliovulado, de cuyo véitice sale un entilo simple y alesnado. Cápsula de 4 celdas conteniendo muchas semillas diminutas, globosa y con el estilo persistente : law- sonia, F. 135. 994. Ovario 5, 1-locular, cuyas celdas contienen 2 óvulos cada una, 995. — Ovario 5, 1-locular con un solo huevecillo en cada celda. El fruto es una especie de nuez coriácea, indehiscente, de VE JET ALES HERMAFKODITOS POLIPÉTALOS. 833 color gTÍs oscuro, arriñonada, larG'a de 12 á 15'" sobre 1 á 9'" de anclio situada en el vértice del pedúnculo carnudo piriforme y que parece una pera bastante cruesa, roja ó amarilla, lustrosa. Véase 217.) 995. Flores polígamas, de 6 á 10 estambres con las anteras obloiir gas, 274. — Flores nunca polígamas, 995. 996. 'Cáliz 4, 5-ñdo ó 4, 5-dentado; corola 4, 5-fida ó con 4, 5 pétalos, 997. — Cáliz diminuto siempre 4-fido ; corola con 4 póta- los imbricados. Arbustos ó árboles bajitos, resinosos, lampiños, con hojas alternas ú opuestas á la par, provistas de puntitos transparen- tes imparipinadas ó 1 folioladas, formadas de 3, 5, 7 pares de lio- juelas aovadas ó deltoídeo-redondeaditas, aovado-oblongas, ao^^ado- lancooladas ó elípticas, enteras ó mas ó menos festoneaditas j lampiñas. Flores en corimbos apanojados, blancas y pequeñas; es- tambres hipójinos 8. Ovario unilocular, con 2 óvulos colgantes ; es- tigma sentado y cabezudo. Drupa pequeña de 4'" de diámetro á lo mas y ordinariamente de 2 solamente : amyris, F. 127. 997. Corola de 4, 5 pétalos valvados, 998. — Corola 4, 5-fida. Ár- bol grande, corpulento, frondoso, de corteza blanquecina que deja chorrear una resina líquida que no tarda en volverse sólida, de olor muy agradable, se eleva hasta 60' y mas de altura. Hojas alternas, compuestas, imparipinadas, bastante grandes, largas de 6-8", for- madas de 3, 4 pares de hojuelas elíptico-lanceoladas, con una punta, bien enteras, lampiñas, casi sentadas, inequilaterales, el lado supe- rior siendo mayor, opuestas, algo undulosas por los bordes, algo cíes- iguales y largas de 4-4 1[2" sobre 20-24"' de ancho. Flores pequeñas blanquecinas, pedunculadas, en racimos terminales, y de cáliz 4, 5- dentadp ; estambres 8, 10, con anteras oblongas. Ovario 4, 5-localar con un estilo simple, de ápice 4, 5-lobo. Drupa globosa, coriácea, abriéndose tarde, con 5, 1 huesecitos, con un surco á lo largo de la línea por donde debe abrirse, lampiña : heclwigia, F. 125, G. ÍII. 998. Arboles resinosos bastante grandes, lampiños, con hojas al- ternas, compuestas, imparipinadas ó trifolioladas, con 5, 7 hojuelas bien enteras, ordinariamente coriáceas, pecioladitas, elíptico-lan- ceoladas, aguzadas, lai^gas de 4-2" sobre 12'"-6"' de ancho. Flores en racimos ó corimbos axilares, 2 á 3 veces mas cortos que la parte desnuda del raquis, de ordinario temadas y cuyo pedicelo es dos ve- ces tan largo como ellas ; de cáliz 4, 5-dentado ; corola con 4, 5 pé- talos valvados, revueltos por el ápice y pubescentes por la márjen ; estambres 8, 10, con antej'as oblongas. Ovario 4, 5-locular, con un estilo de ápice 4, 5-lobo. Drupa coriácea, abriéndose tarde y con 5- 1 hiiesecito : icica, F. 125, G. I. 999. Una legumbre lejítima, 1002. — Una cápsula, 1000. 1000. Cápsula muy larga, con las semillas huesosas y aladas, 1001. — Cápsula no muy larga ni con semillas huesosas ni aladas, 1020. 10()1. Cápsula como silicuiforme, medianícida, 3-valve y larga de 8 á 11". Árbol bajito, bastante coposo y bonito, que se eleva solo á 15-25' de altura, con primorosas hojas alternas, descompuesto- pinatisectas, tres veces pinatisectas, largas de 18 á24", con los seg- mentos ú hojuelas espatulados ó elípticos, obtusos, con glándulas 384 MÉTODO DICOTÓMICO. estipitaclas, pubescentitas, muy caducas j situadas por la cara supe- rior del raquis común, de los raquises secundarios y también de los terceros entre la inserción de los de cada par de hojas compuestas ó en la de los peciolulos de las hojuelas , verde subido y lampiñas ó alampiñadas cuando adultas y algo glaucas, pero de cara inferior pubescente cuando tiernas ; de cada lado de la inserción del raquis hay un tuberculito que parece reemplazar á las estípulas que faltan. Flores preciosas, blancas, olorosas, en grandes panojas axilares en el vértice délas ramitas, derechas, de brazos pubescentes con una bracteita aterciopelada por la inserción , de cáliz con 5 segmentos desiguales, petaloídeos, lanceolado-estrechos, casi tan largos como los pétalos ; corola con 5 pétalos desiguales, sentados, un poco espa- tulados; 10 estambres insertos junto con los pétalos en la garganta del cáliz, de filamentos alesnados, pubescentes, de los cuaies 5 son estériles, desiguales. Ovario funiforme, pubescente, estriado y algo hexágono, verdoso y sostenido por un podójino, unilocular, poliovu- lado y de cuyo ápice sale un estilo blanco, simple, arqueadito, ales- nado, pubescente, tan largo como los estambres, terminándose por un estigma pequeño, glanduloso y puntiforme. Cápsula tríquetra, colgante, larga de 8 á 12", con semillas como huesosas, prietas, con tres ángulos poco marcados, turbinadas y con tres alas membra- nosas saliendo de los ángulos, pegadas por un podospermo muy corto en una especie de celdilla como corchosa : moringa, F. 130, S.-F. 2, T. V, G. III. 1002. Legumbre indehiscente, 1003. — Legumbre dehiscente. 1003. Llena de pulpa mas ó menos abundante, 1004. — Sin tripa ó pulpa alguna, 1007. 1004. Legumbre cilindrica ordinariamente muy larga, con tabi- ques membranosos transversales que la separan en celdas monos- permas, 1005. — Legumbre gruesa como romboídeo-redondeadá, de cascara leñosa, unilocular, conteniendo una sustancia como fariná- cea en lugar de tripa lejítima, 1006. 1005. Arboles bajitos ó á veces bastante grandes y asaz corpulen- tos, muy ramosos, con hojas alternas, compuestas, estipuladas, pa- ripinadas, cuyo raquis es ó no glandulíferc?, formadas de 4, 8, 10, 20 pares de hojuelas, opuestas, pecioladas, algo coriáceas, aovadas, obloncas ó aovado-oblon2:as. Flores en racimos colí]rantes, amarillas ó rosadas, pediceladas, y de cáliz con 5 sépalos sub-distintos y de- ciduos; corola de 5 pétalos, algo unguiculados, abiertos, un poco desiguales, redondos, obtusos, cóncavos y algo undulosos por los bordes ; estambres 10, todos fértiles ó de los cuales 3 abortan y son diformes, con anteras largas, aovado-oblongas, reventándose supe- riormente por rajaduras incompletas ó hacia la base por poros. Ova- rio largo, cilindrico, sostenido por un podójino, y de cu^'o ápice sale un estilo simple, arqueado, terminado por un estigma glandular puntiforme : cathartocarpus, F. 130, S.-F. 2, T. V, G. II. 1006. Árbol muy grande y muy corpulento, frondosísimo, que se eleva á mas de 50' y 60' de altura, resinoso; hojas alternas com- puestas de dos hojuelas coriáceas, lustrosas y lampiñas, subsesiles, largas de 3"-l[4 sobre 18-20'" de ancho, inequiiaterales, oblicua- VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 385 mente oblongo-lanceoladas, enteras, obtusas; hay dos estípulas. Flores blanquecinas en cimas terminales, con pedicelos coitos cuva base está acompañada de dos brácteas membranosas y deciduas, de cáliz 4, 5-partido, pubescente, de limbo deciduo, mientras el tubo casi leñoso es persistente, acompañado de dos bracteitas; corola con 5 pétalos mas largos que el cáliz, algo desiguales, ovales, unguicu- lados, puntiagudos, abiertos, con puntitos transparentes ; estambres 10, cuyos filamentos, blancos, alesnados, largos de 15'" y filiformes, son arqueados por la parte media algo crecida y llevan anteras oblongas y esertas; se insertan junto con los pétalos en el vértice del tubo del cáliz. Ovario estipitado, unilocular, con algunos óvulos comprimidos ; estilo simple, filiforme, mucho mas largo que los es- tambres, arqueado y terminado por un estigma cabezudo: hymenea, F. 130, S.-F.2, T. ni,G. 11. 1007. Samaroídea ó con un ala, 1008. — ]Xunca samaroídea v siempre sin ala, 1009. 1008. Arboles resinosos grandes, coposos y corpulentos, que se elevan á 40 y 50' de altura, con hojas alternas compuestas é impa- ripinadas, de hojuelas membranosas, pecioladas, alternas, oblongas ú ovales, obtusas y con muchas glandulitas transparentes. Flores blancas ó rosaditas, en racimos axilares en el vértice de las ramitas, mas largos que las hojas, pediceladas, y de cáliz troncado apenas 5- dentado, campanudo; corola amariposada mayor que el cáliz ; 10 estambres estendidos y algo inclinados^ mas cortos que los pétalos y con anteras arrejonadas. Ovario estipitado , estrecho, delgado, arqueado, oblongo, mas largo que los estambres, terminado por un estigma comprimido y apenas distinto. Legumbre samariforme, membranosa con 1 ó 2 semillas arriñonadas ocupando el vértice, envueltas en un líquido balsámico amarillento, que mas tarde se vuelve resina, ó sin ese líquido, que se halla en el pericarpio, col- gante del pedicelo y pegada por el ala, larga como de 2 l[2-2" y ancha de 5'" : myrospermirm, F. 130, S.-F. 1, T. 11. 1009. Legumbre erizada ó espinosa, 1010. — Legumbre nunca erizada ni espinosa, 1011. 1010. Arbustos sarmentosos de las orillas del mar, muy ramosos, de tallos larguísimos y aguíjenosos, con hojas alternas, grandes, con estípulas grandes y pinatífidas, paripinadas y formadas de 5, 8 pares de hojuelas pubescentes ó alampiñadas, ovales, oval-oblongas ó aovadas, arrejonadas ;y con puntitos transparentes; raquises pri- marios y secundarios, pubescentitos y con aguijones corvos. Flores amarillas en racimos axilares en el vértice de un pedúnculo común largo y aguijonóse, con pedicelos cortos que salen de la axila de una bráctea lanceolada, decidua y mas larga que la (lor ; de cáliz 5-partido, campanudo ; corola de 5 pétalos ca^i iguales, cóncavos, lanceolados; 10 estambres inclusos, de filamentos peludos inferior- mente y con anteras mediifijas. Ovario larguito y oval, cuyo ápice lleva un estilo simple mas largo que los estambres, terminado por un estigma algo cabezudo. Legumbre anchamente aovado-oblonga, convexo-comprimida, bivalve, coa pocas ó 1 sola semilla, corta- mente estipitada; semillas grandes, huesosas, luotrosas, blancas ó TOMO. I 25 386 MÉTODO DICOTÓMICO. amarillentas, sub-comprimido-globosas : guilandina, F. 130, T. II, G. II. 1011. Legumbre como torulosa y linear, 1012. — Le^rumbre nun- ca toruloí-a ni linear, pero mas ó menos comprimida, 1013. 1012. Árbol bajito, bastante frondoso y de ramas algo estendidas, que se eleva á 15 ó 20' de altura, con hojas alternas, bipinadas con las pínulas apiñadas; peciolos primarios abortivos, mientras los se- cundarios, alargados, alados y linear-aguzados, son pari pinados, con hojuelas diminutas, oblongas ó aovadas, obtü^as, desiguales, las inferiores mayores y largas de 2'" sobre 1|2"' de ancho : las supe- riores suelen abortar, son muy numerosas y hay de 8 hasta 28 pares de ellas en las pínulas de los individuos jóvenes, mientras que en las de los adultos liemos contado hasta 80. Flores amarillas en ra- cimos axilares ó terminales, pedunculadas, y de cáliz 5-partido, cu- yos segmentos lanceolados se doblan por abajo aplicándose al pedí- celo, caducos y amarillentos, pero de base persistente y verde. Co- rola de 5 pétalos algo desiguales, unguiculados, ovales, abiertos, con el superior ó estandarte mas ancho que los demás, con una mancha rojiza, pero no tarda en tomar ese matiz, undulóse por los bordes, algo pubescente interiormente; 10 estambres salientes, algo corvos, pero sin embargo enderezados, con anteras rojizas endere- zadas, ovales y mediifijas, de filamentos peludos por la mitad infe- rior é interna. Ovario elongado, comprimido, moradito y con pun- titos blancos, algo cuadrangular; estilo bien distinto c:isi alesnado, cilindrico, larguito y arqueado, terminado por un estigma poco dis- tinto, oblicuo, algo franjeado por los bordes y con una boca ó aber- tura central. Legumbre linear, larga de 4 á 5", casi cilindrica, pero comprimida entre las semillas, puntiaguda, bivalvo, con algunas ó pocas semillas oblongo-cilíndricas, de color aceitunado, con man- chitas irregulares mas pálidas, lustrosas y muy duras, con una línea mas oscura saliendo del estremo ombilical y que se estiende á lo largo de la cara y divide la semilla en dos partes iguales : pcirlún- sonia, F. 130, S.-F. 2, T. II. 1013. Muy comprimida, aguzada por ambos estremos, membra- náceos sin ventallas, pero que se revienta lonjitudinalmente, según el surco que se ve á lo largo de sus caras chatas, con 2 semillas so- lamente, 1014 — Mas órnenos comprimida y de dehiscencia bivalve, polisperma, 1015. 1014. Árbol de tronco tortuoso y anfractuoso, bastante corpu- lento, poco largo, pero con ramas gruesas y derechas mas largas que él: se eleva ú 30-40' de altura, ba^tante frondoso, de ramitas con fí'ecuencia espinosas ; hojas alternas, pari¡)inadas y compuestas de 3, 4 pares de hojuelas obaovadas, remalladas y lampiñas; base del raquis con una espina estipular. Flores amarillas en racimos axilares erguidos casi tan largos como las hojas y de 2 á 2 1[2"', pe- diceladas, y de cáliz 5-partido, con los segmentos reñejos, desigua- les, memi.j-anáceos, algo purpúreos y deciduos, mientras per&iste el tubo corto, campanudo y verde ; corola con 5 pétalos, casi igua- les, dos veces mas largos que el cáliz, abiertos, obovales y un poco puntiagudos; estambres 10, salientes, de filamentos alternativa- YEJETALES HERMAFEODITGS POLIPÉTALOS. 387 inente desiguales, con pelo por la base, de anteras ovales, insertos junto con los pétalos en la parte superior del tubo del cáliz. Ovario lanceolado, comprimido y con un surco lonjitudinal en cada cara, 3-ovulado, cortamente estipitado, con estilo capilar, recto y algo mas corto que los estambres, terminado por un estigma cabezudo. Leo'umbre larga de 20, 22'", sin el pedicelo, que lo es de 2 l[2-3'", y ancha de 5'" : liematoxylon, F. 130, S.-F, 2, T. II, G. I. 1015. Siempre 10 estambres, cuyas anteras no se abren por dos poros en su ápice, 1016. — Estambres 10, pero de los cuales 3 abor- tan siempre y son mas ó menos diformes; anteras abriómlose por dos poros ó grietas incornpletas por el ápice; legumbre comprimida ó cilindrica, seca ó a veces con alguna pulpa, con frecuencia pluri- locular por causa de seudo-tabiques membranosos, 1019. 1016. Legumbre siempre comprimida, 1017. — Legumbre com- primida, oblonga, seca y bivalve ó como abayada, indehiscente é hinchado comprimida; estigma cóncavo, diminutamente pestañoso ; árboles bajitos ó arbustos ordinariamente aguijonosos, lampiños ó pubescentes, con hojas paripinadas, alternas, estipuladas, compues- tas de 2, 3, 6, 10, 4,-4, 5, 1 pares de pínulas, con 2, 1-8, 12-5, 3, 9 pares de hojuelas lampiñas, alampiñadas ó pubescentes. Flores amarillas ó blancas, en racimaos axilares ó terminales, de pedicelos sin brácteas y articulados, de cáliz apeonzado persistente, de limbo colorido 5-partido, cuyo segmento inferior mayor está abovedarlo ; corola con 5 pétalos desiguales, unguiculados; 10 estambres de fila- mentos lanudos por la base, arqueados y ascendentes. Ovario oblon- go con estilo filiforme, terminado por un estigma cóncavo y dimi- nutamenie pestañoso : coesalpinia, F. 130, S.-F. 2, T. IV, G. I. 1017. Legumbre anchamente oblonga, lateralmente encorvada, llano comprimida, convexa por el lado este.rior y cóncava por el interior, con algunas semillas separadas las unas de las otras por un tejido celular, 1018. — Legumbre plano -comprimida, oblicuamente redondeadita por el ápice, estipitada, prieto-lustrosa, algo torulosa por causa de las semillas, separadas por tejido celular, larga de 4-5" sobre 8-10-12"' de ancho y 2"' de diámetro. Primoroso ar- busto de 10 á 15' ó árbol de liasta 25 á 30' de altura, mnv ramoso y aguijonoso, lampiño, con hojas alternas, paribipinadas, largas de 18 á 20-25", compuestas de 9, 3 pares de pínulas con 10, 5 pares de ho- juelas tan pronto opuestas como alternas, largas de 8 á 10"' y an- chas de 3'", cuyos peciolulos son acompañados de dos estipulitas aguijonosas y pronto caducas, oblongas ó espatulado-oblongas, re- dondeadas ó sub-trancadas por el ápice arrejonado; dos estípulas muy pequeñas, triangulares y muy pronto caducas acompañan á la inserción del raquis, cuya base crecida está acompañada de 3 agui- jones cónicos, de los cuales 2 son laterales y el ter-cero situado en la cara superior. Flores en racimos apanojados, piramidales y termi- nales, largamente podunculadas, bastante grandes, preciosas, ama- rillas ó rojizo-anaranjadas, con pedicelos muy largos y articulados hacia el ápice, de cáliz 5-fido con 5 divisiones desiguales y ca.-i pe- taloídeas, caducas y cuva inferior es mavor v obaovado-aquilla'la : corola con 5 pétalos unguiculados mucho mas largos que el cáliz, 388 MÉTODO DICOTÓMICO. undul oso-festonead OS por los bordes y larg'os de 1"; estambres 10 inclinados y mucho mas largos qae la corola, de filamentos encar- nados lanuditos por la base, con anteras mediifijas. O\^ario verde comprimido mas ó menos estipitado, con estilo filiforme tan largo como los estambres, terminado por un estigma discoideo, cóncavo y pestañosito. Semillas obovales, comprimidas, de ápice acorazonado, mientras la base mas estrecha y oval tiene una cicatriz correspon- diendo con el podospermo triangular y bastante desarrollado : poin- ciana, F. 130, S.-F. 2, T. II, G. III. 1018. Árbol bastante grande que se eleva á 30 ó 40' de altura, inerme y lampiño, muy ramoso y coposo, de tronco corto asaz cor- pulento, que se termina por ramas muy gruesas cuyas inferiores son estendidas. Hojas bipinadas, compuestas de 15, 5, 9 pires de pínulas imparipi nadas, un poco desiguales, las superiores siendo mas lar- gas, formadas de 24, 20, 16 pares de hojuelas oblongo-lineares, ó quizas mejor elípticas, opuestas, sentadas, obtusas, del todo lampi- ñas, de cara inferior mas pálida y provista de puntitos negros dis- puestos en dos series paralelas y lonjitudinales alo largo de la parte mediana de cada mitad: raquis principal y los raquises secundarios cilíndrico-velludos, parte tierna de las ramitas finamente pubes- cente. Flores pequeñas blanco-amarillentas, en racimos compuestos contraidos, cuyos brazos cargan con 8, 12 flores, estriados y pubes- centes, pedicelos filiformes cortos, saliendo de una depresión corres- pondiente, sin brácteas y articulados por el ápice, solitarios y con una sola flor, de cáliz con el tubo persistente y apeonzado, de limbo 5-partido, cuyas divisiones casi iguales son valvares; corola de o pétalos un poco espatulados, cóncavos y rizados por los bordes, iguales á las divisiones del cáliz, largos de 2'"; estambres 10. Ova- rio comprimido color rojizo -morado, así como el estilo grueso -que se termina en un estigma verde pálido, cabezudito, cóncavo y lam- piño. Legumbre larga de 2-1 lp2". ancha de 9-10'" y espesa de3á4"' redondeada por el ápice v con 8, 6 semillas : lebidihia, F. 130, S.- F. 2, T. II, G. IV. 1019. Plantas herbáceas anuales, matas sub-leñosas v leñosas ó arbustos, mas ó menos ramosos, lampiños, alampiñados, pubes- centes ó velludos: hojas alternas, estipuladas, compuertas, paripi- nadas y de hojuelas opuestas ; raquis con ó sin glándulas vasculares situadas por su cara superior sea por encima de la base, sea entre las hojuelas. Flores ordinariamente amarillas, axilares, supra-axi- lares o terminales, en racimos, cimas y panojas, á veces solitarias ó mellizas, pediceladas, y de cáliz con 5 sépalos sub-distintos y deci- duos, mas ó menos desiguales y bastantes veces algo petaloídeos ; corola de 5 pétalos algo desiguales, redondeados, undulosos por los bordes, obtusos y con uñas muy cortas, abiertos y por lo común bas- tante grandes; estambres 10, cuyos 3 superiores abortan con fre- cuencia, con anteras oblongas, biporosas por el ápice, otras veces son 5, 10, todos fértiles, de anteras lineares, reventándose por el ápice á favor de dos rajaduras cortas, pubescentitas á lo largo de un áureo lonjitudinal que presentan ; los 3 estambres inferiores son de ordinario mucho mas largos que los demás, con los filamentos ar- VEJETALES HERMAFRODITOS TOLIPÉTALCS. 389 qiieados, las anteras enderezadas é inclinados, mientras los 4 del centro son derechos y de filamentos cortos. Ovario mas ó menos estipitado, mas ó menos comprimido, largo con un estilo mas ó me- nos largo y arqueado, terminado por un estigma discoideo, glandu- loso y oblicuo en el ápice algo crecido. Legumbre de forma y tamaño muy variados, sea cilindrica ó casi así, leñosa ó coriácea, plurilocu- lar, á veces llena de pulpa, con semillas comprimidas y paralelas á los tabiques, sea plano-comprimida, bivalve, con semillas compri- midas paralelas á las valvas y cuyo diámetro mas largo está trans- verso á ellas, sea membranácea, comprimida, por fin biconvexa ó sub-cilíndrica, bivalve, plurilocular, seca y con semillas comprimi- das y por fin paralelas á los tabiques, algunas veces comprimido- tetrágonay linear, con semillas comprimidas paralelas á las valvas, cuyo diámetro mas largo está igualmente paralelo á ellas, otras raras veces llano-comprimida, indehiscente, crecida en las partes correspondientes á las semillas obacorazonadas, mas cortas que el podospermo, comprimidas, paralelas á las valvas, y cuyo diámetro mas largo e^tá transverso á ellas; en fin Uaná, comprimida, bivalve, con semillas comprimidas, paralelas á las valvas y con podospermo deltoídeo : cassia, F. 130, S.-F.2, T. II, G. 1020. Estambres 10, cuyas anteras, provistas de un apéndice con forma de espolón cónico, posterior y situado por la base, se abren por 1, 2 poros terminales; hojas con tres nervaduras principales, reunidas por un sinnúmero de venas transversales , 971. — Estam- bres 12, 13 ó mas; cáliz tubular con 12 estrías, giboso ó espolonado por la base; ovario desigualmente bilocular con una glándula en su lado superior, 1022. 1021. Arbusto ó árbol de 25, 30' de altura, bastante ramosos, con hojas simples, opuestas, pecioladas, coriáceas, lustrosas, lampiñas, con ó sin tuniorcitos por la base, elípticas ó aovado-lanceoladas con una punta mas ó menos larga, con ó sin dientecitos glandulosos por los bordes, largas de 5 á 6" sobre 3 á 4" de ancho. Flores blancas con la base de los pétalos carmesí ó rosada, ó rosado-purpúrea, bas- tante grandes y primorosas, en cimas terminales ó solitarias, soste- nidas por 2, 4 brácteas algo distantes del cáliz, con limbo abierto, 5-lobo, de lóbulos saliendo por debajo de la márjen ondeada. Ovario siempre libre 5-locular cuyas semillas muchas no están acaracola- das : meriaiía, F. 136, T. III. 1022. Plantas herbáceas anuales ó matas sub-leñosas, con hojas simples, opuestas, mas ó menos cortamente pecioladas ó subsesiles, enteras, lampiñas ó algo pubescentes, aovadas, aovado-lanceoladas, oblongo-lanceoladas ú oblongas. Flores pequeñas, rosadas, alternas, pediceladas, solitarias, axilares, estra-axilares ó interaxilares, otras veces opue:;tas y en racimos terminales; de cáliz monosépalo tubu- loso ; corola con 5 pétalos desiguales. Estilo simple con estigma algo bifido. Cápsula membranosa cubierta por el cáliz marcescente, reventándole lateralmente, de dos celdas con muchas semillas pe- queñas y Ientiformes : cwphea, F. 135, G. I. 1023. Estambres muchos ó á veces 10, 20; drupa mas ó menos carnuda, de hueso liso ; hojas sin estípulas, 1024. — Estambres mu- 390 MÉTODO DTCOTÓMTCO. chos, de los cuales como 20 son fértiles, unilaterales; estilo basi- lar. Fruto drupáceo-carnudo, pero volviéndose por fin seco y sepa- •rándose en valvas ; hojas con estípulas. Arbustos mu j ramosos, de 6' á 15' de alto, muj ramosos, lampiños, con hojas simples, coriá- ceas, alternas, pecioladas, lampiñas del todo, ovales ú oval-redon- deadas, obaovadas ú obaovado-redonditas, de base redondeada ó algo aguzada. Flores pequeñas en cimas corimbiformes, axilares, mas cortas que las hojas j pubescentes, pediceladas, y de cáliz campa- nudo 5-fido, cuyos segmentos un poco doblados hacia fuera son de- ciduos : la base sola persiste; corola con 5 pétalos pequeños endere- zados, espatulados é insertos en la garganta del cáliz; e^tambres desiguales, velludos, con anteras dorsifijas. Ovario sostenido por un ginóforo muy corto adherido al tubo calizinal, oval, lampiño infe- riormente y pubescente por la mitad superior, unilocular con 2 óvu- los colaterales, basilares y anátropos; estilo mucho mas largo que .los estambres. Drupa oval ú obaovada costilluda, del tamaño de como una ciruela, cuyo color varia bastante, blanco-amarillenta, morada, etc. : chryschalanns, F. 131. 1024. Arboles altos ó bajitos, siempre verdes y lampiños, de ho- jas bien enteras, conduplicadas en el botón, alternas, pecioladas, oblongas d aovado-oblongas. elíj^ticas ó eliptical-oblongas, lustro- sas superiormente y provistas interiormente de dos puntos glandu- lares situados por la base, ó un poco distantes de ella y marjinales, los cuales faltan en ciertas especies. Flores en racimos axilares ó laterales, pedunculadas, y de un cáliz 5, 4-fido ; corola con 5, 4 pé- talos, rosácea ; ovario ovoideo unilocular, con dos óvulos colatera- les; entilo terminal. Drupa monosperma ovoidea ó globosa, arrejo- nadita ó troncada por el ápice ; almendra y corteza con olor prúsico ó que huelen á almendras amargas : prnnns, F. 132, írrupo IV. 1025. Estambres monadelfos ó diadelfos, 1026. — Estambres po- liadelfos. 1026. Siempre monadelfos ó siempre diadelfos, 1027. — Monadel- fos ó diadelfos, 1078. 1027. Monadelfos, 1028.— Diadelfos, 1053. 1028. Fruto seco ó una legumbre, 1029.— - Fruto carnudo abaya- do, 1085. 1029. Corola papilionácea ó amariposada , 1030. — Corola no amari posada, 1046. 1030. Legumbre indehiscente, 1031. — Legumbre dehiscente ó á veces indehiscente, 1040. 103 J . Samaroidea ó con un ala, 1032. — Nunca samaroidea, 1035. 1032. Legumbre de ordinario muy dura, comprimida, redondea- da, adelgazada por ambos estremos, ó con un ala estrecha, llevando las semillas en la parte media, 1033. — Sámara muy grande, erizada en toda la parte inferior en donde se hallan las semillas, 1034. 1033. Arboles de 25 á 30' de altura, lampiños, con hojas alternas, estipuladas, imparipinadas y compuestas de 7, 5, 9 hojuelas alter- nas, reticuladas, oblongas, obtusitas ó con una punta, lustro.>o-lam- piñas. Flores amarillas, en racimos ordinariamente compuestos, con pedicelo provisto de dos bracteitas, y de cáliz desigualmente 5-den- VEJETALES HERMA FRODITOS POLIPÉTALOS. 391 tado, con la base apeonzarla, lampiño ó tomentoso j mas largo que el pedicelo; tubo de los estambres abierto por ambos lados o por el superior solamente. Ovario con algunos ó un óvulo solo, sostenido por un poójino : pterocarpns, F. IcJO, S.-F. 1, T. I, G. I. 1034. Arboles bastante grandes y corpulentos, asaz co[)osos, que se elevan á 40-50' de altura, pubescentes; hojas alternas ó esparci- das, grandes, i mpari pinadas y de raquis velludo ó bozoso, algo col- gantes y compuettas de 7, 9, 11 y raras veces de solo 3 hojuelas sub-coriáceas, peninervias, pecioladas, opuestas y allernas en la miísma hoja, desiguales, las de la base siendo siempre mucho meno- res, todas aovado-oblongas, redondas por la base y un poco aguza- das por el ápice, largas de 6-5" las mayores, y anchas de 3-2 Íi4, y las menores de 4-3 1{2" de largo sobre 2 li2-2" de ancho, de cara superior convexa alampiíiada, mientras la inferior abovedada es bo- zo;;a ó velluda, con ó sin escamitas discoideas color de oro; las hojas enteras, largas de 12-14" están acompañadas por la inserción del raquis de dos estípulas bastante grandes, palmatinervias. Flores amarillas y oloiosas en racimos tirsoídeos terminales, de brazos acompañados de brácteas, cuyos pedicelos, largos de 18"' y atercio- pelados, salen de la axila de una bráctea espatiforme ; cáliz campa- nudo, couio bilabiado y 5-fido ala vez, con los segmentos superiores mayores; Cí^rola pequeña apenas eserta, con el estandarte orbicu- lar, las alas oblongas y mas largas que la quilla dipétala ; estambres monadelfos ó á veces diadelfos en las flores del mismo racimo; fila- mentos desiguales y con anteras ovoideas, dortifijas é introrsas. Ovaiio compriniido, irregularmente cuadrilátero, cortamente esti- pitado al principio, peludo, con 2 celdas uniovuladas; estilo lateral con estigma terminal muy pequeño. El ovario, vuelto fruto, es ovoi- deo, ancho de 2" con las púas y de 15'" sin ellas, y parece una cas- taña o bola erizada de púas fuertes, punzantes, aterciopelado-esca- mosas, color bruno achocolatado, largos de 8-10'", con una espina mas fuerte en el vértice y al lado del ala, proviniendo del entilo, ala larga de 5-6" y ancha de 2 li2-3", undulóla por la base que sale del vértice del fruto y prolongándose hasta la base, pero de un solo lado, membranosa y estriado-venosa, la cual, en lugar de hacer cuerpo con el pericarpio, sale de adentro de él, después de haber formado en su interior una especie de saco fibroso de dos celdas con una ó dos semillas pequeñas y Ientiformes : nos parece pues una prolongación aliforme de la placenta : centrolohium, F. 130, S.-F. 1, T. I. 1035. Como drupácea, 1036. — Nunca drupácea, pero con ó sin pulpa. 1038. 1036. Como drupáceo-ovoídea, redondeadita, monosperma y sin carne ó con alguna pulpa esteriormente; semillas sin olor, 1037. — Drupácea, ovoíileo-oblonga, de color como aceitunado, lita, lijera- mente com})rinjida, cortamente pedunculada, con semilla muy aro- mática; epicai'pio como coriáceo, quebradizo, fácilmente separable de una poca pulpa contenida en un tejido esponjoso que sale del hueso á que está muy adlieiido. Árbol grande corpulento y coposo, lampiño, con hojas alternas, compuestas de 4 hojuelas alternas, co- 392 MÉTODO DICOTÓMICO. riáceas, óvalo-lanceoladas, algo puntiagudas por el ápice y redon- deadas por labasre un poco inequilateral, enteras y algo undulosas por la márjen, largas de 4" y anchas de 18 á 22'", de cara superior lustrosa y lisa, peciolo muy corto, situado y contenido en una espe- cie de cavidad á propósito en los lado¿ del raquis, largo de 4", de- primido, como alado y ancho de 1'"; esa especie de ala estrecha está arrollada hacia abajo', formando así como un ribete interrumpido en el lugar correspondiente con la inserción de la hojuela y después de haber echado un apéndice que tapa la foseta de inserción, se estien- de un poco sobre la cara superior y desaparece, la última hojuela parece situada en el ápice del raquis, cuya ala lateral se va prolon- gando como de 1 li2'", terminándose en lengüeta ensiforme.. Flores rosado-moraduscas en racimos terminales, pero cuyo brazo mas in- ferior sale de ordinario de la axila de la última hoja, de pedúnculo y brazos finamente aterciopelados y de color acanelado; pedicelo de las flores saLendo de un hoyo de inserción, acompañado de una bráctea decidua, y con dos bracteitas acompañando á la articula- ción, pronto caducas y que envuelven al capullo. Cáliz un poco comprimido, algo carnoso, con 5 divisiones muy desiguales, cuyas 2 superiores, mayores, son petaloídeas y moraduscas ; estandarte sin uña, cuyas dos mitades están casi aplicadas la una á la otra; quilla cuyos dos pétalos están soldados entre sí hacia el lj3 supe- rior; estambres con anteras basifijas, pequeñas, globosas é inclusas. Ovario algo estipitado, comprimido, lampiño, con figura áe w , de podójino morado, con un estilo blanco algo alesnado, terminado por un estigma cabezudo y glanduloso. Fruto largo de 2 li2-2" y ll2" de diámetro : cmnaruna, F. 130, S.-F. 1, T. I, G. VIL 1037. Arboles de hojas imparipinadas ; flores purpuráceas, apa- nojadas, de cáliz cortamente 5-dentado ó troncado; pétalos de la quilla diítintos, 1082. 1038. Con pulpa siempre. Corola no lejítimamente papilionácea por causa de aborto, 1039. — Siempre sin pulpa alguna, 1040. 1039. Primoroso árbol bastante corpulento y muy coposo, que se eleva á 45 ó 50' de altura, lampiño, con hojas alternas paripinadas, largas de 5 á 6", estipuladas y formadas de 10, 15, 18 pares de ho- juelas opuestas, casi sésiles, oblongas, retusas ó redondeadas por el ápice, deciduas, lampiñas, de base inequilateral y un poco de&igua- les. Flores amarillento verduscas, disciplinadas, en racimos axila- res, pendientes, paucífloros ; pedicelos saliendo de la axila de una bráctea oboval algo coloradita y decidua; cáliz 4-partido, bilabiado y apeonzado por la base, deciduo; corola con 3 pétalos undulosos, enderezados, muy unguiculados y desiguales, de estandarte oblongo con la márjen enrollado-rizada : los dos pétalos de la quilla faltan siempre, pero están reemplazados por dos apéndices subulados que se hallan por debajo de los estambres, que son 3, inclinados, con los rudimentos de 4 mas. Ovario estipitado, con el ginóforo adherido al tubo del cáliz, alargado, velludo, arqueado, de estilo poco distinto, terminado por un estigma cabezudo. Legumbre morena, rugosa, algo corva, como torulosa, de cascara seca y frájil, semi-cilíndrica y con 3 líneas salientes y lonjitudinales, larga de 4-5 sobre 1 1[2 YEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 393 de ancho; 6 á 12 semillas negras, lustrosas, irregiilarmente trape- ciformes : tamarindus, F. 130, S.-F. 2, T. III, G. I. 1040. Con 4 alas anchas, membranáceas y lonjitudinales, 1041. — Sin ala alguna, 1042. 1041. Árbol ramoso, lampiño, que se eleva á 25, 30' de altura, con hojas alternas imparipinadas, estipuladas, compuestas de 5, 4, 3 pares de hojuelas opuestas, pubescentas ó alampiñadas, oblongas ó elípticas, ú óvalo-lanceoladas, pecioluladas cuva impar mayor que las demás es casi espatulada, puntiagudas, largas de 2á3" sobre 1, 1 1[2 de ancho. Flores precoces blanco-rosadas ó purpuráceas, en racimos laterales ó terminales compuestos ; pedicelos unifloros, pubescentes j articulados superiormente; cáliz campanudo, corta y anchamente 5-dentado, pubescente; corola cujeas alas adhieren con la quilla l'alciforme; estandarte adherido, con la columna estaminal por encima de la base. Ovario con 4 lados, alargadito, pluriovulado, con estilo alesnado terminado en un estigma puntiagudo. Legum- bre linear, larga de 2-4" y ancha de 4'", pubescentita, sostenida por un podójino largo de 5-2'" y de ordinario 3 veces mas que el cáliz, cuyas 4 alas anchas y membranáceas están á lo largo de ambas már- jenes, dos por cada una y transversalmente estriadas, laceradas ó undulosasy anchas de 8-6'". Semillafe 6, 8, transversalmente oblon- gas, negras, sub-comprimidas y largas de 3 1[2'" : piscidia, F. 130, S.-F. 1, T. I, G. III. 1042. Subterránea , plantas herbáceas , 1043. — Nunca sub- terránea, 1044. 1043. Yerba anual , de tallos muy ramosos y desparramados, ascendientes por el vértice, lampiña ó velluda, de raiz con algunos tuberculitos pisiformes ; hojas paripinadas, alternas, estipuladas, inequilaterales, lanceoladas y adheridas á la base del raquis, falci- formesy largas de 8-10'" sobre V" de ancho por la base, compues- tas de dos pares de hojuelas oblongo-ovales, opuestas, lampiñas y lustrosas, pero pestañosas, largas de 10-1.5-20" sobre 5-8-12'" de ancho, con el raquis largo de 3", llevando las hojuelas opuestas y cortamente pecioladas, el primero par á 10"' del ápice que carga con el segundo. Flores amarillas, con pedúnculos muy largos, axi- lares, paucífloros, y de cáliz de tubo alargado y filiforme, de limbo con 4 segmentos, 3 superiores y 1 inferior ; corola de estandarte redondito aplicado á las alas que no están estendidas. Ovario con pocos óvulos de estilo filiforme larguísimo, con el estigma eserto. Legumbre ovoídeo-cilíndríca, un poco torulosa, de cateara como apergaminada, de superficie rugo>a y como reliculada, terminada X-)or un pico, y con 2, 3 semillas : arachis, F. 130, S.-F. 1, T. IV, G. II. • 1044. Legumbre mas ó menos oblonga, como avejigadita, aper- gaminada y en que las semillas hacen ruido cuando madura, nunca rojas ; 10 estambres, 1045. — Legumbre oblonga, sub-troncada por ambos estreñios y dividida por tabi'.jues falsos, semillas globosas, coloradas con una mancha negra, lu&trosas; 9 estanil)res. Mata abe- jucada, de tallos lamosítimos, muy largos, delgados, alampiñados ó lampiños, con hojas paripinadas, alternas, con una punta termi- 394 MÉTODO DICOTÓMTCO. nando el raquis, estipuladas, compuestas de 11 á 15 pares de hojue- las oblongas ó quizas mejor elípticas, obtusas, arrejonaditas por el ápice, de cara superior verde oí^curo lustrosa y lampiña, mientras la inferior, mas pálida, tiene pelo esparcido ó es alampiñada, largas de 4-5'" Y anchas de 1 1|2, alternas ú opuestas en la misma hoja, larga de 2 ll2", con el* raquis y peciolos pubescentes. Flores rosadi- tas en racimos axilares ó terminales y fatciculadas en los brazos, de cáliz troncado y unduloso; corola de estand'arte casi horizontal, no mas largo que los otros pétalos, alas mas cortas que la quilla, cuyos pétalos están soldados entre sí; andróforo abierto por la parte cor- respondiente al estandarte con que está algo pegado por la uña. Le- gumbre desigualmente 4-lateral, oblonga, de color aceitunado y pu- bescente, larga de 15 á 18'" y ancha de 8'", algo crecida en los lugares correspondientes á la semillas rojas ordinariamente 4, á veces color de carne, siempre lustrosas y con la mancha negra: abms, F. 130, S.-F. I, T. III, G. III. 1045. Plantas herbáceas anuales, matas sub-leñosas ó arbusti- Uoí, algunas veces desprovistos de hojas reemplazadas por un íilo- dio simulando una hoja simple, con estípulas mas ó menos desarro- lladas y á veces escurridas á lo largo del tallo, ú hojas impari pinadas alternas, estipuladas y compuestas de 3, 5 hojuelas larganriente pe- cioladas. Flores de ordinario amarillas ó amarillentas, en racimos terminales, y de cáliz campanudo, con 5 divisiones profundas, como bilabiado: corola de estandarte grande, quilla falciforme v libre : estambres altei nativamente desiguales : cj'otalaria, F. 130, S.-F. 1, T. V, S.-T. III, G. I. 1046. Legumibre con pulpa y mas ó menos indehiscente, 1047. — Legumbre sin pulpa, 1048. 1047. Corola con 3 pétalos; pulpa hallándose en el mesocarpio. Legumbre enteramente indehiscente; estambres 3, 2-fértiles, 1039. — Legumbre indehiscente ó reventándose por las márjenes espesas y ensanchadas, comprimida ó sub-prismática ; semillas encerradas en la pulpa que las tiene envueltas á manera de arilo. Arboles altos y coposos, lampiños ó pubescentes, ásperos ó lisos, inermes ; hojas alternas, estipuladas, pinadas, cuyo raquis está de ordinario pro- visto de glándulas situadas entre los pares, compuestas de 2,1-2,3- 1,4-4,5-4,3 pares de hojuelas mas ó menos grandes, pubescentes ó lampiñas, coriáceas ó membranáceas. Flores blancas en 'cabezas, umbelas, espigas ó racimos axilares ó terminales, sentadas ó subse- siles, de cáliz 5-dentado; corola tubulosa 5, 4, 2-dentada y peque- ña, algo mas larga que el cáliz; estambres muchos y muy largos, de filamentos filiformes muy esertos : inga, F. 130, S.-F. 3, T, II, G. VI. 1048. Corola de 5 pétalos mucho mas grandes que el cáliz, un- guiculados, blanca ó roja; estambres definidos y apenas esertos, 1049. — Corola 5-fida apenas eserta y muy pequeña; estambres muchísimos ordinariamente y de filamentos muy largos v esertos, 1050. 1049. Cáliz 4, 5-fido encerrado en una especie de vaina bracteo- lar de ordinario bífida; corola roja ; ginóforo adherido al tubo cali- VE JET ALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 395 zinal, legumbre siempre dehiscente ; hojas paripinadas, 934. — Cá- liz desnudo de tubo cilindrico, con el limbo ligulado-espatáceo, raras Teces 5-partido ; corola grande abierta y blanca : ginóforo no adhe- rido con el cáliz y libre ; legunibre bivalve ó indelli^cente. Hojas simples bífidas, ó quizás mejor formadas de dos hojuelas grandes soldadas por el lado interno, 945, 1050. Estambres muchísimos ó 10, 1051. — Estambres siempre muchísimos; legunnbre acaracolado, ó torcido en espiral con las se- millas ariladas o sin arilo; Arboles grandes ó arbustos armados ó inermes, lampiños ó pubescentes, con hojas bipinadas, alternas, de raquis con glándulas situadas entre las pínulas, j compue.-^tas de un. par de pínulas con un solo par de hojuelas, otras veces liaj 2,4.-4, 8, 8,16 pares de pínulas con ^,8-3,12-12-20,30 pares de hojuelas. Flores en cabezuelas ó en etpigas seniles ó sub-sentadas, v de cáliz 5-partido; corola 5, 6-dentada : pithecolobium, F. 130, S.-F. 3, T. 2, G. V. lOol. Legumbre dehiscente con elasticidad , ordinariamente comprimida y mas espesa por las márjenes, 1052. — Legumbre in- dehiscente, algo pulposa, ancha, casi con figura de oreja humana, comprimida, hinchada en los lugares correspondiendo con lassemillas, con tabiques falsos, coriácea y lustroso-bruna. Árbol primoroso muy alto, muy frondoso y muy corpulento, lampiño y con hojas grandes alternas, cuyo raquis lleva las glándulas situadas entre el primero ó el último par de pínulas 4, 9-yugadas ; con 20, 30 pares de hojue- las, inequilaterales, oblongas, con una punta, verde mar por la cara inferior, del todo lampiñas y lustrosas por la superior, largas de &" . Flores subsesiles blanco-verduscas en cabezuelas anchas de 6'", con el pedúnculo largo de 1 li2", cáliz pubescentito, 5-fido ; corola 5-dentada, raras veces 5, 3-fida; estambres muchí.-imosy blancos. Legumbre undulosa formando un arco entero, cuyo ápice llega hasta á tocar la base también redonda, ancha de 1 1['2-1 3[4" y el fruto entero tiene 3-4" de diámetro : enteroloMum, F. 130, S.-F, 3, T. II, G. VI. 1052. Arbustos inermes ó armados, algunas raras veces árboles bajitos ó muy grandes, bastantes veces polígamos, 291. 1053. Legumbre cubierta de pelo tieso, cuja picadura abrasa muchísimo, 1054. — Legumbre desnuda, 1055. 1054. Plantas heibáceas ó matas volub.es de tallo larguísimo, muy ramoso, con hojas alternas, estipuladas, de tres en rama, cuyas hojuelas, ordinariamente bastante grandes y desiguales, están del todo lampiñas ó sedo.-as por la cara inferior. Flores grandes fasci- culado-racemosas ó amanojadas, amarillas, purpúreas ó azul-oscu- ras, etc.; de cáliz cortamente cam[)anudo 4-fido ó 4-deniado; corola de estandarte conduplicado-aovado, aovado-lanceolado ó aovado- oblongo, mitad de lo largo ó ca^i tan largo como las alas y orejudo por la base ; quilla de ordinaiio cartilaginosa por el ápice lijera- mente eserto: estambres de anteras alternativamente desiguales. Estigma terminal. Legumbre, gruesa, coriácea, oblongo-linear y sin crestas,© comprimido-oblonaa y con crestas transversales convexas: mucuna, F. 130, S.-F. 1, T.^VI, S.-T. 111, G. V. 396 MÉTODO DICOTÓMICO. 1015. Legumbre lomentácea, 1056. — Legumbre nunca lomen- tácea, 1057. 1056. Comprimida j formada de unos artejos ó de solamente 2, monospermos, separándose y desprendiéndose cuando maduros, in- deliiscentes ó dehiscentes. Plantas herbáceas tendidas y volubles, ó matas volubles de tallo derecho muj largo j muy ramoso; hojas alternas, estipuladas, ordinariamente de tres en rama, que á veces están unifolioladas por causa de aborto. Flores amarillas, rosadas, blancas ó morado-azuladitas, fasciculad'o-racimosas, terminales ó axilares, raras veces simplemente fasciculadas, pediceladas, y de cáliz tubulado, cortamente campanudo, como bilabiado y cuya base está acompañada de dos brácteas ; corola de estandarte obaovado, con las alas adheridas á la quilla biorejuda ; estambre correspon- diente al estandarte adherido á la columna ó á veces libre : desmo- dium, F. 130, S.-F. 1, T. IV, G. I. 1057. Legumbre linear, 1058. — Legumbre nunca jamás linear, 1061. 1058. Algo comprimida, larga hasta de Y, estipitada, túmida por ambas márjenes; flores muy grandes de quilla obtusamente falci- forme, 1059. — No comprimida, tetrágona, alargada ó masó menos cilindrica, mas ó menos encorvada, pequeña, no estipitada ; ñores pequeñas, de quilla con un espolón por cada lado, 1060. 1059. Árbol bajito, con pocos ramos bastante largos y estendidos, que se eleva á 15 ó 20' de altura, con hojas alternas, paripinadas, largas de 10" j formadas de muchos pares de hojuelas pubescentes ó alampiñadas, desiguales, cuyas superiores é inferiores son mas pequeñas, cortamente pecioladas, alternas escepto las 4 del ápice, que Cfetán opuestas, obovales ó casi elípticas, obtusas y enteras, lar- gas, las mayores, de 14'"" y anchas de 5-5 l\2"' . Flores muy gran- des, largas de 3 1[2", blancas ó moraditas, pendientes y en racimos paucífloros axilares, pedi'celadas, y de cáliz campanudo, unduloso- dentadito ; corola con estandarte oval-oblongo mas corto que las alas libres y que la quilla cuyos pétalos no están soldados entre sí. Semillas separadas por tabiques falsos: agati^ F. 130, S.-F. 1, T. galégeas, H., G. 111. 1060. Plantas herbáceas anuales ó matas sub-leñosas, á veces ar- bustillos, de tallo derecho y ramoso, mas Ó menos pubescentes ó con pelo frecuentemente pegado por la parte media ; hojas impari- pinadas, alternas, estipuladas, compuestas de 2,3,1-2,5-6-4,3,1,7 pares de hojuelas opuestas, ovales, obao vado-oblongas, eliptical- oblongas y en fin espatulado-oblongas. Flores disciplinado-purpurá- ceas en racimos axilares derechos mas cortos que las hojas, pedun- culadas, y de cáliz 5-ñdo, con los segmentos abiertos; corola de estandarte redondeadito ; e&tambres 10^ siempre diadelfos, con an- teras apiculadas. Legumbre bivalve, arqueadita, larga como de 12 á 18'", con las semillas troncadas y separadas por tabiques falsos : indignfera, F. 130, S.-F. 1, T. galégeas, H., G. I. 1061. Mas ó menos comprimida, 1062. — Sub-cilíndrica y sub- comprimida á la par, 1074. • VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 397 1062. Únicamente comprimida, 1063. — Sub-comprimida sola- mente. 1063. Cáliz nunca acompañado de brácteas, 1064. — Cáliz siempre con brácteas, disco vainifero, 106*7. 1064. Cáliz 4-fido, con el lóbulo superior bidentado ; estandarte redondeadito y orejudo; estambres siempre diadelfos; legumbre contraída entre las semillas muchas, 1065. — Cáliz desigualmente 5-fido ó 4, 5 partido ; estandarte sin orejas; estambres mas veces diadelfos; legumbre no contraída entre las semillas 1 ó 2, 1066. 1065. Arbusto de 6 á 12' de altura, bastante ramoso y lampiño, con hojas alternas, estipuladas, largamente pecioladas y trifoliola- das, cuyas hojuelas coriáceas, cortamente pecioluladas. lanceolado- oblongas, puntiagudas y blanquecino-sub-tomentosas interiormente, son largas de 2"-2 li2" sobre 15-18'" de ancho. Flores amarillas en racimos axilares paucífloros, pediceladas, y de corola cuyo estan- darte está á veces con manchas anaranjadas. Ovario pluriovulado. Legumbre continua larga de 1 1[2 á 2", con algunas semillas lenti- culares : cajamis, F. 130, S.-F. 1, T. IV, G. II. 1066. Yejetales sub-leñosos ó mas ó menos herbáceos, volubles, de tallo mas ó menos largo y ramoso, anguloso ó sub-cilíndrico, to- mentosos ó alampiñados, con frecuencia provistos de glandulitas amarillas; hojas alternas, estipuladas, compuestas de 3, 1 hojuelas, aovado- romboideas, ó aovadas, con una punta ó sin ella. Flores pe- queñas, ordinariamente amarillentas, las mas veces en racimos axi- lares, pauci ó plurífloros, mas ó menos pediceladas, de cáliz 5-fido, con el lóbulo inferior nras largo, ó 4-partido, casi tan largo como la corola y con el segmento superior bífido; corola de estandarte con venitas ó estrías purpur4ceas. Legumbre larga de 6-10'" ó de 10- 12'" sobre 3-4'" de ancho, cuyas semillas reniformes ó redondeadi- tas con un rafe mas ó menos pronunciado tienen 1-2-2 1[2'" de diá- metro : rUncliosia, F. 130, S.-F. 1, T. VI, S.-T. I, G. I. 1067. Estandarte orejudo por la base y bicalloso por el medio, 1068. — Estandarte orejudo y sin callos, 1071. 1068. Callo de la base semi-lunar ó falciforme agudo; quilla rec- ta, torcida, encorvada ó sub picuda; estambre del estandarte espo- lonado por la base, 1069. — Estandarte acanalado y con 4 callos, de los cuales 2 son superiores y proeminentes; quilla falciforme encor- vada á ángulo recto ó torcida ; estambre del estandarte sin espolón y contenido en el canal formado por los callos, 1070. 1069. Plantas herbáceas anuales ó vivaces algunas veces, de ta- llos muy ramosos, delgados, volubles, mas ó menos largos, lampi- ñas, alampiñadas ó pubescentes ; hojas alternas, estipuladas, com- puestas de 3 hojuelas con estipulitas. Flores raciraoso-fasciculadas, blancas, amarillas ó purpúreas, pediceladas, de cáliz campanudo cortamente 4, 5-fido; estilo cartilajinoso rollizo ó acanalado algo adelgazado por el vértice y terminaíjo por un estigma terminal ca- bezudo y pelierizadito. Legumbre con las valvas convexas ó planas, y cuyas semillas, separadas por tabiques falsos y delgados, son com- primidas ó aovado-sub-reniformes, con la estrófila pequeña: doli' chos, F. 130, S.-F. 1, T. VI, S.-T. III, G. II. 398 MÉTODO DICOTÓMICO. 1070. Plantas anuales herbáceas, de tallo larguísimo muy ramoso y voluble, con hojas alternas, estipuladas, compuestas de 3 hojuelas bastante grandes, pecioladitas j e&tipuladitas por la inserción. Flo- res blancas o á veces purpuráceas, en racimos pedunculados acom- panados de una hojuela única ó quizás mejor opuestos á un ramo abortado foliáceo; pedicelos semi-ve ttici lados ; cáliz campanudo- tubuloso y 4-fido, con la lacinia superior ancha y obtusa, mientras las 3 inferiores son agudas ; corola de estandarte abierto ó esten- dido. Ovario estipitado pluriovulado , terminado por un estilo com- primido con el vértice sub-barbudo y el estigma terminal troncado j lampiño. Legumbre llano-comprimida, acinaciforme y hacia am- bas suturas tuberculado-arrejonada, sub-rtetrasperma; semillas se- paradas por tabiques fallos y celulosos, algo compi-imidas, ovales y blancas ú oval-redondeaditas, negras ó purpuráceas, con un callo blanco : laMab, F. 130, S.-F. 1, T. VI, S.-T. III, G. IV. 1071. Biorejudo y obaovado; cáliz campanudo y coqio bilavado, 1072. — Uniorejudo y redondeadito ; cáliz campanudo 4, 5-fido, 1073. 1072. Planta herbácea ó sub-leñosa, vivaz, de raiz tnberoso-fe- culenta, bastante gruesa, de tallo muy largo, ramosísimo y voluble, lampiña, con hojas alternas, estipuladas, compuestas de tres hojue- las ordinariamente sinuoso-anguiosas, deltoídeo-aovadas, de cara inferior pulsescente ó alampiñada, largas de 3 1|4" ó 4 li2" y an- chas de 4,3'', con e^tipulitas por la inserción. Flores azules teñidas de morado, en racimos espiguiformes, pediceladas y agrupadas por a 3 ó por á4, de cáliz campanudo ó quizás mejor aorzado, pubescen- te, bilabiado, con el labio supeiior mayor algo escotado y obtuso, mientras el inferior, trílobo, es calloso pqr los senos; corola con el estandaite obaovado, de ápice escotado, alas oblongas, largamente unguiculadas y orejudas ó dentadas, quilla de pétalos adheridos por la márjen. Ovario un poco alargado, estipitado y cuj^a base está en- vuelta en una vainita membranosa saliendo del disco; estilo grueso, comprimido transversalmente, i)eludo y con un estigma terminal. Legumbre r^^cta, alampiñada, sub-flexuosa por la márjen, largado 5-G" sobre 10 á 12'" de ancho, con 7, 8 semillas comprimido-redon- deadas, algo ariiñonadas, coloradas ó parduscas: pachyrrizus, F. 130, S.-F. 1, T. VI, S.-T. III. 1073. Vejetales anuales de tallo mas ó menos largo, ramoso, vo- luble ó postrado, con hojas alternas, estipuladas y compuestas de 3 hojuelas aovadas ó aovado- lanceoladas, lampiñas, alampiñadas ó peludas por la cara inferior, con estipulitas en la inserción. Flores amarillas á veces disciplinadas de color purpureo, cuyos pedúnculos axilares llevan cabezuelas umbeliformes ó raci mitos, pediceladas. Estilo cartilajinoso v peludo por el vértice, con estií^ma lateral: vigila. F. 130, S,-F. 1, T. VI, S.-T. líl, G. VI. 1074. Cáliz siempre acompañado de dos bracteitas, 1075. 1075. E^tandarte grande, e^polonoso por arriba de la base; le- gumbre costilluda hacia ambas márjenes, 1076. — Estandarte sin espolón, ni giboso; quilla torcida en espira; legumbre no costilluda, 1077. VEJETALES HERM AFRODITOS POLIPÉTALOS. 399 1076. Plantas lierbáceas ó de tallo sub-leñoso por la base, volu- bles, muy ramo>a.<, con hojas alternas, estipuladas, compuestas de 3 hojuelas de tamaño y forma variando un poco, según las especies, cuya inserción lleva una estipulita situada esteriormente, mientras la impar e&tá con dos. Flores primorosas, grandes, inversas, azules, blancas, di.^ciplinadas de purpúreo y de amarillo, axilares y melli- zas ó en raci mitos paucífloros y también axilares, pediceladas y de cáliz infunüibuliforme, ordinariamente 5-fido y como bilabiado; co- rola inversa, de manera que el e&tandarte , muy ancho y redondea- do, está pendiente, mientras la quilla, de una sola pieza, cuyos dos pétalos están soldados, se ha vuelto superior y es muy saliente. Ovario larguito, comprimido, algo arqueado, condos surcos laterales y pubescente, cuyo estilo dilatado hacia el ápice lleva un estigma espatulado y pestañoso. Legumbre sentada, comprimida, mas órne- nos linear y cilindrácea, con falsos tabiques celulosos entre las se-* millas troncadas : centrosema, F. 130, S.-F. 1, T. YI, S.-T. 11. 1077. Plantas herbáceas, de ordinario anuales, de tallo mas ó menos largo, delgado, ramoso y voluble, lampiñas, alampiñadas, pu- bescentes ó sedosas; hojas alternas, estipuladas, compuestas de tres hojuelas, cuyas laterales son de ordinario oblicuas y provistas de estipulitas por la inserción ile su peciolo muy corto y como articu- lado. Flores blancas, amarillas ó purpuráce^s, fasciculado-racemo- sas, pedunculadas y de cáliz campanudo 4, 5-fido ó 4, 5-dentado; corola de estandarte redondito; estilo cartilajinoso por el véi-tice y con un estigma oblicuo ó lateral. Semillas comprimidas mas ó menos arriñonadas, blancas ó coloradas : pIiaseohis,F. 130, S -F. 1, T. VI, S.-T. III, G. I. 1078. Estambres monalelfos ó diadelfos, 1079. — Estambres nun- ca monadelfos, pero si diadelfos ó triadelfos ; legumbre como dis- coidea, llano-comprimida y monosperma, 1084. 1079. Cáliz acampanado de dos brácteas, 1080. — Cáliz sin brác- teas, 1082. 1080. Cáliz -campanudo, bilabiado; estandarte redondeadito ; es- tambre del e&tandarte adherido á la columna por encima de la base; legumbre bastante grande, tumida-sub-comprimida, llena de tejido celular y con las valvas frecuentemente costilludas á lo larsTo de las . suturas, 1081. — Cáliz campanudo ó espatiforme, nunca bilabiado; estandarte conduplicalo muy largo y mucho mas que las alas con- tenidascon frecuencia en el cáliz; estambres monadelfos por la base, pero cuyo filamento del qi.ie corresponde al estandarte está frecuen- temente libre por encima de ella. Arboles de ordinario bastante al- tos y corpulentos, muy coposrs y que se elevan á 40-50' de altura, aguijonólos ó inermes, lanipiñosó aterciopelados; hojas alternas es- tipuladas y compuestas de 3 hojuelas pecioladas, aovado-romboida- les algo desiguales, siendo la in>par siempre mayor. Flores de ordinario de color de escarlata, mas ó menos largas, precoces, fas- ciculado-racimosas, de cáliz campanudo-troncado , con dientecitos obsoletos ó espatiforme, con 5 dientes diminutos por el ápice y cuya rajadura llega casi hasta la base ; corola con los pétalos de la quilla pequeños y distintos; legumbre torulosa, linear, í"alsiforme, llena de 400 MÉTODO DICOTÓMICO. tejido celular, á veces folicular ó indehiscente; semillas casi globo- sas, encarnadas v de ordinario con una mancha negra, muy lustro- sas Y bonitas : erythrina, F. 130, S.-F. 1, T. VI, S.-T. IIÍ, G. YII. 1081. Vejetalesde tallo largo, sub leñoso inferiormente, voluble, muj ramoso, alampiñados ó lampiños; hojas alternas, estipuladas, compuestas de 3 hojuelas bastante grandes. Flores purpuráceas en racimos axilares, pediceladas y de cáliz con el labio superior entero ó bílobo, mientras el inferior es trífido ó entero; corola de quilla encorvada y obtusa. Legumbre siempre dehiscente , larga de 6-9- 10-3" V ancha de 12-10-15'", con semillas blancas ó bruno-oscuras, ovoídeo-oblongas ó redondeaditas, algo comprimidas : caiiavalia, F. 130, S.-F. 1, T. VI, S.-T. II, G. III. 1082. Legumbre dehiscente, blanco-comprimida, plurisperma, 1083. — Legumbre indehiscente, como drupácea, ovoídeo-redon- deaditay monosperma; árboles bastante grandes y coposos, que se elevan á 40'-50' de altura, asaz corpulentos; hojas alternas, impari- pinadas, compuestas de 4, 8, 3, 4 pares de hojuelas opuestas, lanceo- lado-oblongas ú oblongas, aguzadas, con una punta ó retusas, del todo lampiñas ó de cara superior lampiña, mientras la inferior es herrumbroso-pubescente. Flores purpúreas en panojas terminales bastante grandes, pediceladas; cáliz cortamente 5-dentado ó tron- cado; corola con los pétalos de la quilla distintos; estambres mona- delfos ó con el filamento del estandarte á veces libre. Ovario e&tipi- tado, pauci ó uniovulado, con un estilo corto encorvado, terminado por un estigma diminuto. Semilla pendiente, de raicilla muy corta, recta y supera : andira, F. 130, S.-F. 1, T. I, G. II. 1083. Vejetales sub-leñosos ó matas leñosas y á veces anuales, que se vuelven por fin sub-leñosas, pubescentes, tomentosos ó ater- ciopelados, de tallo ordinariamente derecho, ramoso ó algunas veces desparramado, con hojas alternas, estipuladas, imparipinadas y compuestas de 4, 7, 9, 11, 20 pares de hojuelas, raras veces son 3, 1-folioladas. Flores purpúreo-azulitas ó blancas, racimosas y termi- nales ó á veces fasciculadas y hasta solitarias, pediceladas y de cá- liz 5-fido, con los segmentos mas ó menos desiguales; corola de estandarte redondito v sedoso esteriormente, con las alas transver- salmente rugositas y de ordinario adheridas á la quilla obtusa; es- tambre del estandarte adherido á la columna por encima de la base ó raras veces distinto. Ovario inserto oblicuamente, larguito, pu- bescente ó lampiño, terminado por un estigma cabezudo, lampiño ó pestañoso. Legumbre llano-comprimida, sentada, algo coriácea, ar- queada y pubescente, con algunas semillas arriñonado-comprimidas, adornadas de manchitas blancas y negras : tephrosia, F. 130, S.-F. 1, T. galégeas, H, G. II. 1084. Arbustos di las orillas del mar, muy ramosos, con hojas alternas, estipuladas, imparipinadas ó l-folioladas y compuestas de 3, 5, 2 hojuelas alternas, aovadas ú ovales, puntiagudas y lampiñas, ó de una sola aovada ó aovada-oblonga y pubescente inferiormente. Flores pequeñas, blancas, en racimos cortos, de ordinario corimbo- sos y axilares; cáliz corto y desigualmente dentado; estambres 10, 9, de anteras bíñdo-didínamas. 0\^ario largamente estipitado y con VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 401 dos Óvulos. Legumbre coriácea, oblicua y casi discoidea, lisa v pu- bescente, de podójiuo tan largo como el cáliz ó lijeramente asimé- trica, oval-orbicular, lisa y lampiña, de podójino mas largo que el cáliz: hecatophyÜKm, F. 130, S.-F. 1, T. I, G. VI. 1085. Plantas herbáceas ó mas frecuentemente matas ó arbusti- llos abejucados, muy ramosos, sarmentosos y sosteniéndose por me- dio de zarcillos axilares, de tallos delgados y muy largos ordinaria- mente, pubescentes ó lampiños. Hojas simples, alternas, largamente jiecioladas, mas ó menos profundamente lobuladas, partidas ó diji- tadas, cuyo peciolo tiene bastantes veces una ó algunas glándulas situadas por su cara superior , y de inserción con dos estípu- las foliáceas mas ó menos grandes, de forma y tamaño muy va- riados. Flores solitarias, ordinariamente grandes y primorosas, ó pequeñas, pedunculadas, y de cáliz monosépalo 5, 4-partido ó pro- fundamente lobulado, cuyo tubo está adornado por una corona, de ordinario compuesta de apéndices filiformes pintados de los mas hermosos colores, mas ó menos numerosos y dispuestos en algunas series : bastantes veces el cáliz está sostenido por un involucro an- cho formado de 3 hojuelas ó 3-fido; la corola suele faltar bastante á menudo y cuando existe tiene 5 pétalos; estambres 5 y á veces 4, insertos en la parte superior del ginóforo, de filamentos achatados, con las anteras movibles y pegadas por la parte media del dorso á favor de un apéndice, oblongas y bastante grandes, las cuales en el acto de la fecundación dan una vuelta para presentar su cara al es- tigma. Ovario sostenido por un podójino larguísimo, que suele faltar algunas veces, y que pasa por dentro del andróforo y que lo tiene por encima de los estambres, unilocular, con 3 placentas poliovuladas: del ápice salen 3 estilos bastante largoS; gruesos, obcónicos, diver- jentes, casi horizontales y algo inclinados hacia abajo, con un es- tigma cabezudo ó con forma de boca, pero sin estar hueco, redondo y de circunferencia sinuosa. Baya á veces muy gruesa, de forma, color y tamaño muy variados, con muchas semillas hoyosas : 2^assi- flora, F. 144. 1086. Ovario enteramente infero, 1087. — Ovario semi-infero ó cáliz semi-adherente. 1087. Estambres perijinicos, 1088. — Estambres epijínicos. 1088. En número definido, 1089. — Muchos é indefinidos, 1094. 1089. Fruto carnudo, abayado, 1090. — Fruto seco capsular ó no, 1091. 1090. Matas leñosas de 2-4' de altura ó arbustos de 10', muy ra- mosos, de ordinario pelierizados, con hojas simples, opuestas, pe- doladas, enteras, aserradas ó festoneadas, tripli-5-nervias ó con las nervaduras principales encorvadas y alcanzando al ápice, y las venas y nervios formando con ellas una redecilla : lo que es caracte- rístico, aovado-oblongas ó aovadas. Flores en cimas subsesiles, axi- lares, corimbiformeséjigualesá los peciolos, blancas ó rosadas y de cáliz campanudo ó semi-globoso, con 5,4, 6 lóbulos alesnados y ordinaria- mente abiertos: corola con 5, 4 pétalos torcidos; estambres 8, 10, 12. inclinados en la estivacioñ, es decir doblados por abajo hacia el ovario ó el fondo del cáliz, v al abrirse las flores se enderezan v se TOMO 1 t^t 402 MÉTODO DICOTÓMICO. vuelven ascendentes, de anteras anteriores y adheridas al conec- tivo , reventándose ordinariamente por 1 ó 2 poros terminales y lineares: algunas veces son mas gruesas , tuberculadas por el lado posterior ó la base, con las celdas reunidas. Ovario casi libre en el capullo y adherido solamente por algunas líneas longitudinales, pero por fin enteramente pegado con el cáliz, de ápice prolongado en pico largo, cilindrico y asurcado. Baya azul pelierizada, con semillas ovales ó á veces piramidales : clidemia, F. 136, T. I,- G. II. 1091. Cápsula lejítima y sin alas, 1092. — Cápsula formada de 3 cocos y de ordinario alada ; arbustos sarmentosos ó trepadores, pro- vistos á veces de zarcillos terminales, 1093. 1092. Plantas herbáceas, algunas veces acuáticas y nadantes, pero casi siempre enteramente terrestres y de los lugares húmedos y hasta pantanosos, matas sub-leñosas ó arbustillos, de tallo de ordi- nario derecho y muy ramoso , desparramado ó tendido, lampiñas, pubescentes ó velludas; hojas simples, alternas, subsesiles ó corta- mente pecioladas, enteras ú ondulosas por los bordes, alguna que otra vez aserraditas. Flores bastante grandes amarillas y alguna vez blancas, solitarias y axilares, en el vértice de las ramitas, de mane- ra que su disposición simula bastantes veces espigas apanojadas, habiéndose vuelto las hojas muy pequeñas, de pedúnculo mas ó me- nos corto, cuyo ápice lleva dos bracteitas; cáliz de tubo obtuso-an- gulosoóprismatical-obaovado, tan largo como el ovario con que ad- hiere, con limbo 4, 5, 6-partido; de segmentos mas ó menos largos, mas ó menos ovales ó lanceolados, puntiagudos, lampiños, pubes- centes ó peludos, abiertos y deciduos ; corola con 4, 5, 6 pétalos an- chos, mas ó menos redondos y enteros, cóncavos y unguiculados; estambres en número doble de los pétalos con que los unos alternan, mientras los otros están opuestos á ellos, de filamentos derechos, bastante largos, cuyo ápice alesnado lleva una antera grande, es- trorsa y abriéndose por una grieta lonjitudinal ; la inserción de los filamentos opuestos á los pétalos está acompañada de pelo blanco dispuesto como en semi-luna. Ovario muy largo con 4 ángulos, 4, 5 celdas poliovuladas : del centro de su ápice troncado y cubierto por el disco sale un estilo anguloso terminado por un estigma ancho y como hipocrateriforme, cuyo centro está ocupado por un cuerpo glanduloso y oval. Cápsula 4, 6-locular, con muchísimas semillas diminutísimas y brunas, 8, 12-costilludito y abriéndose por la des- trucción del pericarpio :jtcssi(sa, F. 138. 1093. Mas ó menos altos, muy ramosos, con algunas ramitas vol- viéndose zarzillos, hojas alternas, simples, estipuladas, pecioladas, peninervias, elípticas, aovadas ó aovado-oblongas, aserradas ó fes- toneado-aserradas, lampiñas, alampiñadas ó de cara inferior to- mentosa ó pubescente. Flores pequeñas, amarillentas, en grupos es- parramados á lo largo de pedúnculos pubescentes ó velludo-tomen- tosos, axilares ó terminales y arracimadas; cáliz de tubo persistente y adherido con elevarlo, apeonzado, 5-partido; corola con 5 pétalos convoluto-espatulados; estambres insertos junto con los pétalos á un disco 5-lobo, cuyos lóbulos libres están opuestos á los segmentos del cáliz, con anteras redondas. Ovario redondeado, 3-locular, con 3 VEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 403 estilos. Al madurarse la cápsulA los cocos inclehiscentes que la for- man se desprenden, dividiendo así cada ala en dos, cuya mitad «lle- van consigo, monospermos: goíiania, F. 124, G. III. 1094. Cáliz de muchísimas divisiones, cuyas interiores se con- funden á veces con los muchos pétalos que forma la corola y están dispuestos por series; estambres y estilo de ordinario muy "largos, 1095. — Cáliz de 5 divisiones siempre, corola siempre de 5 pétalos 1105. 1095. Vejetales carnosos mas ó menos ramosos, cuya altura y ta- maño varian muchísimo, casi siempre con aguijones mas á menos numerosos, y que parecen agujas y son muy punzantes, mas ó me- nos largos, fasciculados y blancos , reemplazados á veces por un pelo tieso y también muy punzante, sin hojas lejítimas ó de ninguna clase, 1096. — Arboles bajitos, con aguijones que parecen agujas fuertes en grupos esparcidos y diverjentes ; con hojas lejítimas car- nosas, 1104. 1096. Parásitas ordinariamente, de tallo cilindrico ramosísimo, delgado, colgante y que no pasa de 2' de largo, 1100. — Raras veces y casi nunca parásitas, cuyos tallos anguloso-comprimidos y á veces cilindricos son mas ó menos derechos, estendidos ó trepadores, mas ó menos largos y mas ó menos ramosos, 1101. 1100. Tallos cilindricos con ramos también cilindricos ó compri- midos y simulando así alas foliáceas, articulados, alternos, opuestos ó verticilados. Flores pequeñas blanquecinas, sentadas entre los fes- tones de los ramos comprimidos ó laterales en los cilindricos, de cáliz tubular corto igualando al ovario desnudo, sépalos, pétalos y estambres indefinidos y reunidos entre sí por la base. Ovario infe- rior unilocular , poliovulado; estigmas distintos. Baya cilindrica, pisiforme, algo prieta ó blanca: rliipsalis, F. 146, G. III. 1101. Tallo mas ó menos articulado, con ángulos mas órnenos preeminentes, en número variado según las especies, derecho ó ten- dido por el suelo, mas ó menos ramoso, alguna vez que otra trepa- dor ó rastrero, 1102. — Tallo articulado ó quizás mejor formado de artejos ó piezas mas ó menos grandes, pero que no se sepa- ran , comprimidas y provistas de una especie de púas carnu- das caducas que son tenidas por hojas abortadas, acompañadas de pelo blanco y de espinitas situadas encima de tubérculos mas ó me- nos pronunciados, de los cuales salen flores sentadas mas ó menos grandes y situadas por el vértice y circunferencia de las piezas figu- rando con frecuencia hojas grandes y muy espesas, 1103. 1102. Superficie ordinariamente dispuesta en redecilla y con areolas desnudas, con pelo ó espinitas mas ó menos largas y nume- rosas, diverjentes; fiores con frecuencia muy grandes y primorosí- simas sentadas hacia el vértice de los tallos ó ramos y sobre los ángulos ó laterales, color de rosa ó blancas, algunas veces muy olo- rosas, de cáliz que se va dilatando por arriba mas allá del ovario y entonces tubuloso, con sépalos esteriores adheridos que lo hacen parecer como escamoso ; sépalos, pétalos y estambres muy ramosos, cuyos últimos están dispuestos- en muchas series sobre el tubo del cáliz con que está soldada la corola, cuyos pétalos están también 404 MÉTODO DICOTÓMICO. por series. Ovario mas ó menos grueso, espinoso, ovoideo ó redon- deado, unilociüar, poliovulado: del centro del ápice troncado sale un estilo único filiforme mas largo que los estambres, los cuales esceden la corola, ó igualándoles, que lo tienen como prisionero en su centro, terminado por tres estigmas distintos ó por un estigma único y trílobo. Baya mas ó menos gruesa, con muchísimas semillas casi sin endospermo, de embrión cuyos cotiledones, de ordinario en- corvados, se dirijen hacia el hilo : cereus, F. 146, G. I: 1103. Flores solitarias sésiles y laterales , amarillentas, mas ó menos rojizas ó rosadas, de cáliz cuyo tubo iguala el ovario, esca- moso y con los sépalos esteriores y caducos; sépalos, pétalos y es- tambres indefinidos y reunidos entre sí por la base; ovario unilocu- lar poliovulado : del centro de su ápice sale un estilo filiforme igualando casi á los estambres, de ordinario mas cortos que la co- rola, ó mas corto que ellos, entonces esertos y terminado por 3 es- tigmas distintos. Baya mas ó menos gruesa, desnuda ó proA'ista de espinitas ó de pelo punzante muy fino, cuyas muchísimas semillas, pequeñas y comprimidas, contienen un embrión cuyos cotiledones están enroscados á manera de espiral en derredor de un endospermo escaso : ojnmtia, F. 146, G. II. 1104. Arbustos ó árboles de 12 á 20' de altura, cuyo tronco, lar- go de 8 á 12', echa pronto ramos largos y estendidos ó á veces rec- tos, con hojas simples, alternas, oblongo-elípticas ó algo espatula- das, sub-sentadas, y cuya base del peciolo está acompañada de pelo blanco corto y ala pa.r de 1, 2 espinas cort?tS, encorvadas ó rectas. Flores sentadas, precoces, esparcidas á lo largo de las ramitas y en especial hacia el vértice, blancas, purpúreas ó amarillas, solitarias ó en cimas racemosas, de cáliz tubulado, cuyo tubo no se prolonga mas allá del ovario, foliáceo porque se queda con los sépalos mas esteriores que simulan hojas y persisten, mientras los interio- res, dispuestos por series, se marchitan y desprenden; corola cuyos muchos pétalos, pluriseriados, se insertan en la parte superior é in- terior del tubo, calizinal, mientras los estambres lo están por la inferior. Ovario unilocular, poliovulado, con hojas, de cuyo ápice troncado sale un estilo cilindrico, filiforme, tan largo como los es- tambres y terminado por un estigma trílobo y glanduioso. Baya re- dondeada, desnuda solamente por el vértice ombilicado, mientras la mitad inferior está con hojitas esparcidas pequeñas ; muchas semi- llas de endospermo escaso j cuyo embrión tiene los cotiledones fo- liáceos : perescia, 146, G. IV. 1105. Fruto bastante grueso, que no es ni baya ni drupa, de cor- teza ó concha corticosa, polilocular, con las semillas envueltas en un arilo carnudo y rosado, coronado por el limbo persistente del cáliz, ó una balausta, 1106. — Fruto abayado, 1107. 1106. Arboles bajitos ó arbustos ramosísimos, con frecuencia es- pinosos; hojas simples, opuestas ó fasciculadas, sin puntitos transpa- rentes, cortamente pecioladas, lanceolado-oblongas ó linear-lanceo- ladas, por ambos estreñios aguzadas, algo coriáceas, lampiñas y lustrosas, un poco undulosas por los bordes, y especialmente agru- padas hacia el vértice de los ramos largos, delgados, en varita, y VEJ EXALES HERMAFRODITOS MONOPKTAI.OS. 405 terniiiiándose por un grupo de algunas flores encarnadas ó amari- llentas muy bonitas. Cáliz infundibuliforme de tubo apeonzado, con el limbo espeso, casi coriáceo y 5, T-lobo, cuyos segmentos lanceo- lados se terminan por un tuberculito carnudo y puntiagudo, de es- livacion valvar; corola con 5, 7-pétalos insertos en la parte supe- rior del tubo calizinal en una depresión ó surquito que se halla en la parte interna de cada seno que separa las divisiones del cáliz, con que alternan, sésiles, redondeados, enteros, derechos y algo undu- losos; muchos estambres libres desiguales, de filamentos encarna- dos, filiformes, derechos, con el ápice doblado hacia dentro y pro- visto de una antera amarillenta y dorsifija, insertos en un disco que íbrra todo el interior del tubo calizinal. Ovario redondeado ó ca>i esférico, cuyo ápice en forma de cono y saliente en la garganta del cáliz lleva un estilo simple bastante grueso, cilindrico ó casi con fi- gura de botella, terminado por un estigma discoideo, glanduloso, con una depresión por el centro j verdusco. Fruto bastante grueso, esférico, manzaniforme, coronado por el tubo calizinal , de cascara coriácea, colorada ó amarillenta, cuyas muchas celdas irregulares están dispuestas en 2, 3 series, cuya inferior es 2, 4-locular y la su- perior 4, 9-locular, conteniendo muchas semillas de embrión oblon- go con la raicilla corta, basilar y puntiaguda, los cotiledones foliá- ceos y enroscados á manera de espiral : púnica, F. 134. 1107. Cáliz de limbo enteramente cerrado y sin división alguna, pero que se revienta en la estación de la florescencia, 1108. — Cá- liz de limbo ordinariamente con 5 divisiones valvares, 1111. 1108. Limbo calizinal abriéndose circuí ármente hacia la parte media y á lo largo de la línea de inserción, mucho por encima del ovario: la corola suele faltar con frecuencia, 1109. — Cáliz reven- tándose por el vértice en 2, 3 lóbulos irregulares y desiguales, uno de los cuales se lleva frecuentemente el ápice separado á manera de gorra, á veces la corola suele faltar, 1110. 1109. Arboles mas ó menos grandes ó arbustos ramosísimos, cu- 3^as ramitas cilindricas ó comprimidas v como de dos filos, tienen puntos interpeciolares, lampiñas, pubescentes, herrumbroso-sedosae ó velludas; hojas simples, opuestas, mas ó menos pecioladas, de or- dinario lampiñas, lustrosas, ordinariamente con muchos puntos transparentes, elípticas, eliptico-lanceoladas ó eliptical-oblongas ú oblongo-lanceoladas, aguzadas y terminándose por una punta obtu- sa, lampiñas por ambas caras ó por la inferior. pubescentitas, alam- piñadas ó sedosas. Flores blancas situadas hacia el vértice de las ramitas, en donde forman racimos compuestos ó simples, otras ve- ces están en grupos axilares, cuyos pedicelos lampiños, pubescen- tes, tomentosos ó sedosos, mas ó menos cortos, son 2, 3, 5-cótomos ó ahorquillados; cáliz de limbo cerrado 3' adherente; corola con 2, 5 pétalos mas ó menos abortados y que faltan las mas veces; estam- bres muchísimos y distintos. Baya de ordinario pequeña, monosper- ma ó con algunas semillas de testa cartilajinosa, de embrión con los cotiledones espesitos, foliáceos; arrugados ó torcido-plegados, y la raicilla casi tan lartia como estos c inllexa : calyptranthes, F. 133, T. I,G. I. 406 ■ MÉTODO DICOTÓMICO. 1110. Aricóles bajitos ó arbustos mas ó menos ramosos, cuyas ra- mitas lampiñas ó ' lierrumbroso-tomentosas llevan hojas simples, opuestas, cortamente peciolaclas, mas ó menos coriáceas, óvalo-lan- ceoladas, aguzadas por la base y de vértice obtuso y redondo, ó elíp- ticas y obtusamente puntiagudas, enteras ó festoneaditas, con mu- chos puntitos transparentes, de cara superior lustrosa, lampiña y rugosita, mientras la inferior, mas pálida y también rugosita, tiene las costillas y nervaduras pubescentes y bastante pronunciadas, otras veces sin puntos transparentes, lustrosas y lampiñas por la cara superior, mientras la inferior es herrumbroso-pubescente ó to- mentosa á lo largo de la costilla, y cuyas nervaduras asaz preemi- nentes se van reuniendo hacia la márjen, en donde forman un arco continuo y flexuoso. Flores blancas, bastante grandes, solitarias, axilares y largamente pedunculadas, ó en cimas tricótomas, de pe- dúnculos herrumbroso-tomentosos ; corola de 5, 8 pétalos ó nula ; estambres muchísimos. Ovario con 2, 3 celdas conteniendo 2 ó al- gunos óvulos, de estilo alesnado mas largo que los estambres y ter- minado por un estigma cabezudo. Baya globosa mas ó menos gruesa, coronada por los restos del limbo caiizinal y aromática : 07iarliera, F. 133, T. I. 1111. Cáliz de ordinario cerrado en el capullo ó diminutamente 4, 5-dentado, }' por fin reventándose en tantos lóbulos simétricos; pétalos 4, 5; ovario 5, 2, 7-locular poliovulado; embrión anular, de semilla alargada v cuvos cotiledones son muv cortos, 1112. — Cáliz nunca jamás cerrado en el botón, pero con los lóbulos ó divisiones bien marcados y separados; prefloracion valvar, 1113. 1112. Arboles baiitos ó arbustos muv ramosos, cuvas ramitas te- tragonas, comprimido-cilindricas, son lampiñas, pubescentes ó alam- piñadas y llevan hojas opuestas, simples, pecioladas, situadas hacia el vértice, cartáceas ó coriáceas, oblongas ó eliptical-oblongas, lan- ceolado-oblongas, oval-oblongas ó aovadas. Flores blancas bastante grandes, con pedúnculos axilares pauci ó raras veces multífloros; es- tilo mas largo que los estambres, alesnado, derecho, deciduo, sa- liendo del centro del disco que forra todo el fondo del cáliz y en que se insertan los estambres, muchos v desií?uales. Bava mas ó menos gruesa, globosa, oval, piriforme, de pulpa rosada ó blanca, umbili- cada, con muchas semillas de testa muy aguda ó huesecitos muy pe- queños, de un olor particular característico. Hojas aromáticas: psidmm, F. 133, T. 1-, G. YI. 1113. Tubo caiizinal bastante desarrollado y bien pronunciado, cilindrico ó apeonzado, 1114. — Tubo del cáliz poco desarrollado ó apenas pronunciado, 1067. 1114. Cilindrico, cuyo fondo está lleno de una especie de tejido ; ovario 2-locular, poliovulado ; cotiledones semi-ovoídeos, sinuosos, aljroquelados y encerrando en parte la raicilla alargada y derecha, 1115. — Apeonzado mas ó míenos desarrollado, 1116. 1115. Árbol bajito, frondoso y de copa piramidal, con hojas sim- ples, opuestas, coriáceas, elíptico-oblongas ú óvalo-lanceoladas, de limbo algo escurrido en el peciolo, que tiene hasta 2" de largo, cre- cido y como articulado por la base, enteras, lampiñas y lustrosas, TEJETALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 40*7 con los nervios laterales numerosos saliendo en ángulo recto de la costilla. Flores blancas teñidas de rosado, muy olorosas, en racimos sinuosos, terminales, tricótomos, con los pedicelos cortos y bastante espesos, articulados y provistos de 2 bracteitas; cáliz de limbo con 4 segmentos colorados y persistentes ; corola con 4 pétalos, cohe- rentes, redondeados, sentados, algo cóncavos, derechos, abiertos y deciduos ; muchos estambres mas largos que los pétalos, que á pri- mera vista parecen libres, pero que están en 4 haces ó grupos si- tuados en una especie de hoyo cuadrangular hacia la base de los dientes del cáliz, con los filamentos amarillos, de anteras oval-aco- razonadas y de igual color. Ovario oblongo algo cilindrico, con 2 celdas conteniendo como 20 óvulos, de los cuales uno ó dos sola- mente no abortan; estilo filiforme, corto y algo alesnado, saliendo del ápice del ovario y del centro de una especie de disco ó glándula cuadrangular, sin adherir con ella, terminándose por un estigma pequeño y cabezudo. Baya ovoidea coronada por el cáliz, larguita, algo claviforme, con una ó pocas semillas cilindricas ó casi ovales, oleajinosas y muy aromáticas, cuyo embrión elíptico, grande, espe- so, verdusco, con los cotiledones espesos, carnudos, semi- ovoideos, abroquelados, desia'uales, encerrando la raicilla corta y superior : caryopJiyllus, F. 133, T. I, G. VIH. 1116. Muy desarrollado; embrión nunca enroscado en espira, 1117. — Menos desarrollado; embrión enroscado á manera de espi- ral, 1120. 1117. Mas largo que el ovario y sin ninguna especie de tejido en el fondo, 1118. — No mas largo que el ovario y provisto de una es- pecie de tejido que llena su parte inferior ; embrión globoso ú ovoi- deo", ordinariamente indiviso y de raicilla corta, 1119. 1118. Árbol lampiño, de hojas coriáceas, ovales ú oboval-oblon- gas, pecioladas y sin puntitos transparentes, largas de 4-3" sobre 2-2 1\2" de ancho, sin el peciolo, que es largo de 10 á 6'", redon- deadas por el ápice. Cimas laterales tricótomas, con flores blancas dispuestas en racimitos, de cáliz tubuloso, cuyo limbo es ondulóse ó troncado; corola con 4, 5 pétalos coherentes, y sin embargo deci- duos. Ovario con dos celdas multiovuladas. Baya con una ó pocas semillas, de embrión con los cotiledones semi-globosos , distintos y abroquelados, encerrando la raicilla corta : syzygkim, F. 133, T. I, G. IX. 1119. Arboles bastante grandes y coposos que se elevan á 30 ó 40' de altura, con hojas simples, opuestas, cortamente pecioladas, co- riáceas, lustrosas, lampiñas, oblongas, lanceolado-oblongas, obaova- do-oblongas ó lanceoladas, mas ó menos aguzadas, largas de 5-8'' y anchas de 2 á 3", enteras, con muchísimos puntitos transparentes. Flores bastante grandes, primorosas, blancas ó purpúreas, en cimas laterales y terminales á la par, paucífloras, simples y mucho mas cortas que las hojas, de pedúnculos sin brácteas y casi articuladas con el cáliz, de base adelgazada y con el limbo 4-lobo, segmentos obtusos y profundos; corola con 4 pétalos dispuestos á manera de rosa, blancos ó purpúreos, anchos, cóncavos y obtusos, mucho mas cortos que los estambres libres. Ovario 2, 3-locular, con muchos 408 MÉTODO DICOTÓMICfO. Óvulos, de los cuales uno solo ó dos no abortan ; estilo simple, filifor- me, alesnado y casi tan largo como los estambres. Baya esférica ó pisiforme, amarillenta ó purpurácea, con una ó dos semillas mas ó menos libres dentro del fruto : jamliosa, F. 133, T. I, G. III. 1120. Cáliz con 4, 5 y hasta 6 segmentos, pétalos en igual núme- ro; ovario 4 ó multilocular, algo coronado, de celdillas multiovula- das; baya con pocas semillas, de testa membranácea, cuyo embrión tiene la raicilla alargada y los cotiledones cortos, 1121.* — Cáliz con 4, 5 divisiones, pétalos en igual número; ovario cuyas 2 celdas con- tienen 2 ó algunos óvulos; baya como drupácea con 1, 2 semillas, de testa membranácea, de embrión en espiral ó inclinado, con la rai- cilla alaro-ada v los cotiledones cortos, 1122. 1121. Árbol bajito muy aromático, ramoso, cuyas ramitas pubes- centes y comprimido-cilindricas, llevan hojas rugositas, simples, opuestas, pecioladas, membranáceas, elípticas, apiculadas, alampi- ñadas, opacas, largas de 3-2", sobre 2-1 1{2" de ancho, con el pe- ciolo de 4'"; venas primarias pareciendo costillas, arqueadas, dis- tantes y cuya impresión aparece por la cara superior, mientras están algo espesas y bastante pronunciadas por la inferior, con los nervios transversales y mas delgaditos. Primorosas flores blancas, axilares, con pedúnculos solitarios ó fasciculados, algo distantes y largos de 4-12'", están -acompañados de 2 brácteas largas de 3-2'" y llevan brácteitas de 1 1^2"'; corola de pétalos obaovados largos de 3"' y dos veces mas que los segmentos del cáliz. Baya globosa y blanca, pequeña como de 3'" de diámetro : campomanesia, F. 133, T. I, G. VIL 1122. Arboles de copa piramidal bastante corpulentos y que se elevan hasta 45-50' de altura, con las ramitas comprimido-subtetrá- gonas, alampiñadas ó lampiñas, que llevan hojas simples, alternas ú opuestas, coriáceas, bien enteras, pecioladas, oblongas ólanceolado- oblongas, obaovadas, ovales ú obaovado-redondeaditas, lampiñas, lustrosas j con puntitos negros por la cara inferior, en donde las venas y nervios son bastante pronunciados. Flores blancas en cimas terminales ó axilares, tricótomas y plurífloras, mas largas ó mas cortas que las hojas ; ¡mnenta, F. 133, T. I, G. V. 1123. Cáliz 5, 4:-lobado; pétalos 5, 2; ovario 2, 4-locular, cuyas celdillas contienen 2 óvulos nada mas: embrión de cotiledones espe- sito-foliáceos, arrugados ó torcido-plegados, casi tan largos como la raicilla inclinada, 1124. — Cáliz 4, 5-lobo; pétalos 4, 5; ovario con 2, 3 celdas multi ó 2-ovuladas; embrión globoso ú ovoideo, or- dinariamente indiviso, con la raicilla corta, 1125. 1124. Arbustos, árboles bajitos ó á veces arboles grandes y copo- sos, cuyas ramitas alampiñadas, pubescentes ó herrumbroso-tomen- tosas, llevan hojas opuestas, bimples, enteras, pecioladas, coriáceas, opacas ó con puntitos transparentes, de cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior, mas pálida, está algunas veces alam- piñada, con las venas en redecilla ó diminutamente areoiadas, ob- ovales, eliptical- oblongas ó elíptico-lanceoladas, obtusas, escotadas ó con una punta, de tamaño variando entre 1 y 4" de largo sobre 1-2" de ancho; sin embargo, las liay hasta de 10-12" de largo. Fio- VE JÉTALES HERMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 409 res en cimas de ordinario mas largas que las hojas, cuyo tubo cali- zinal se prolonga algo mas allá del ovario ó apenas está tan largo como él; baya con una ó pocas semillas de testa cartilajinosa, con el ápice cóncavo ó llano, pero siempre mas ó menos coronado • onyrcia, F. 133, T. I, G. II. 1125. Arbustos, árboles bajitos ó á veces bastante grandes, cuyas ramitas lampiñas, alampiñadas, pubescentes, tomentoso ó sedo'^so- herrumbrosas, llevan hojas simples, opuestas, enteras, coriáceas ó papiráceas, pecioladas, del todo lampiñas, con puntitos transparen- tes y algunas veces opacas, ovales, cuneiforme-elípticas, elíptico- lanceoladas. óvalo-lanceoladas, elípticas ú obo val-oblongas, mas ó menos aguzadas ú obtusas, con las venas mas ó menos delgadas y pronunciadas por la cara inferior y juntándose para formar un arco mas ó menos continuo, flexuoso, alguna vez que otra doble y mas ó menos distante de la márjen. Flores blancas axilares, solitarias ó fasciculadas, racimosas ó corimbosas, cuyos pedicelos mas ó menos cortos están provistos de bracteitas ó sin ellas. Ovario casi tan largo como el tubo del cáliz ó mas corto que él. Baya con una ó algunas semillas, ovoidea ó globosa, de tamaño y color muy variados y algu- nas veces comestible : eugenia, F. 133, T. I, G. IV. 1126. Estambres 8, 20, semi-epijínicos, 1127. — Estambres ente- ramente epijínicos, 1128. 1127. Plantas herbáceas, carnudas, de tallos desparramados y tendidos ó derechitos, en especial por el vértice, largos de 6 á 12", cilindricos, mas ó menos moraditos, lampiños, con hojas simples, alternas ú opuestas, subsesiles ó algo pecioladas, esesas y carnudas, espatuladas ó sub-cilíndricas, pequeñas, lampiñas, entej arrimas, de ordinario arrosetadas por debajo de las flores, á las cuales forman asi una especie de involucro. Flores amarillas ó rosadas, termina- les y agrupadas, sub-sentadas, de cáliz 2-partido, con el tubo adhe- rido, y cuyo limbo es deciduo; corola con 4, 6 pétalos mucho mas grandes que las divisiones del cáliz, semi-epijinicos, abiertos y de- licados. Ovario esférico, semi-infero, unilocular, poliovulado, con un estilo 3, 8-partido. Pixidio envuelto por el cáliz persistente, con muchas semillas muv pequeñas, negras y diminutamente granujien- tas -.portídaca, F. 148, T. II, G. II. 1128. Estambres muchos é indeñnidos; fruto capsular, 1129. — Estambres 5 : el fruto es un diaquenio, 1130. 1129. Planta herbácea, cuya parte inferior del tallo es sub-leñosa, ramosiíimo, largo, delgado, como articulado, con pelo blanco y as- peridades, como sarmentoso y saliendo de una raiz fusiforme del tamaño del dedo pulgar. Hojas simples, alternas, pecioladas, hasta- do-trílobas, desigualmente aserradas, pubescentes y largas de 2", sin el peciolo, que lo es de Y" , sobre 15-18'" de ancho. Flores ama- rillas axilares, solitares y situadas hacia el vértice de los ramos, de 8-10'" de diámetro; cáliz de tubo cilindrico ó claviforme, con pelo agarabatado, glanduloso y muy pegadoso, cuyo limbo 5-íido, deci- duo, se desprende después de.veriñcada la fecundación de una sola pieza y lleva consigo la garganta y los órganos en ella insertos ; corola con 5 pétalos ovales algo esertos, algo espatulados y pubes- 410 MÉTODO DICOTÓMICO. centes esteriormente; estambres de 20 á 30, mitad tan largos como la corola, cutos 10 mas esteriores tienen los filamentos espatulados, siendo todos mas cortos que la corola, con anteras elípticas basifijas. Ovario oblongo como claviforme, unilocular, con muchos óvulos, de cuyo ápice sale un estilo filiforme bastante largo, derecho y termi- nado por un estigma algo cabezudo. Cápsula claviforme y cilindrica á la par, cubierta de mucho pelo glanduloso, claviforme, muy pega- doso y transparente, unilocular polisperma, abriéndose en 3 valvas por el ápice y se desprende del pedúnculo como si fuera articulada : mentzeIia,Y. 142. 1130. Flores siempre en umbela simple ó compuesta, 1132. — Flo- res nunca en umbela pero en cabeza involucrada, 1131. 1131. Planta herbácea bisanual, lampiña, de tallo dicotómico- desparramadito alto como de 1' ; hojas alternas simples espinosas, coriáceas, cuyas inferiores espatulado-lanceoladas, aserradas, con los dientes puntiagudos y punzantes, largas de 4, 4 1|2, b" , anchas de 11, 15, 20"', son envainadoras por la base del limbo, mientras las superiores son mucho mas pequeñas, lanceoladas y palmatipartidas, sin vaina por la base. Flores blanquecinas, pequeñas, sésiles y agrupadas sobre un receptáculo cilíndrieo-cónico, cubierto de pa- juelas espinosas separando las flores, cuyo conjunto forma una ca- bezuela ovoídeo-oblonga, cortamente pedunculada, cuya base está envuelta por un involucro de hojuelas espinosas mas largas que la cabezuela, lanceolado-palmatipartidas y de ordinario profundamente aserradas; cáliz de limbo 5-partido, persistente, de tubo corto ás- pero y con vejiguitas ; corola con 5 pétalos, de ápice algo escotado, derechos, converjentes, oblongos ú obovales ; 5 estambres ca3''os fi- lamentos, arqueados al principio, no tardan en enderezarse. Ovario ovoideo, algo comprimido, de cuyo centro del vértice salen dos esti- los diverj entes. Fruto rollizo ú ovoídeo-oblongo, tuberculado ó es- camoso, coronado por el limbo calizinal vuelto espinoso, formado de dos carpidlos ó aquenios sin fajas ni costilludo tampoco, enteramente adheridos al carpóforo ó columna : eryngmm, F. 149, S.-Or. I, T. III. 1132. Umbelas simples ó prolíferas ; hojas larguísimamente pe- cioladas, abroqueladas ó acorazonadas, mas ó menos festoneadas y nunca pinatisectas, 1133. — Umbelas siempre compuestas; hojas siempre pinatisectas, 1134 1133. Plantas herbáceas de los lugares húmedos y hasta panta- nosos, de tallo delgado, mas ó menos largo y arraigante, lampiñas, con hojas alternas, simples, de peciolo largo de 6 á 8'' mas ó menos, según el lugar en donde se cria la planta, cilindrico, derecho, sos- teniendo un limbo orbicular, festoneado ó acorazonado-redondeadito ó cordiforme-aovado con un seno abierto y festoneado-dentado, dentado solamente ó undulóse, lampiño ó alampiñado, de 18 á 24'" de diámetro, mas d menos doble y carnoso. Flores en umbela abierta ó recojida con algunas ó pocas flores pediceladas, acompañada por la base y en el vértice del pedúnculo largo de 4 á 6" y mas de un involucro de 4 á 5 hojuelas ; cáliz de limbo entero y apenas notable; corola con 5 pétalos aovado-agudos, enteros, iguales y blancos ; es- VEJETALES HEEMAFRODITOS POLIPÉTALOS. 411 tambres 5. Diaqiienio lateralmente comprimido, cujos carpidlos sin fajas, con 5 ó 9 costillas, son filiformes : hydrocotyle, F. 149, S.- Or. I, T. I. 1134. Fruto ovoideo, oval ó globoso, mas ó menos comprimido, con ó sin púas, mas ó menos estriado, 1136. — Fruto cilindrico, bas- tante largo, estriado y mas ó menos picudo, 1135. 1135. Planta herbácea anual, de tallo derecho, lampiño, lustroso, alto de como 2' algo mas ó menos ; hojas bastante grandes, alter- nas, envainadoras por la base, cuyas inferiores largamente peciola- das son 3-pinatisectas, mientras las del tallo y ramos van volvién- dose mas simples á medida que se acercan del vértice. Flores pequeñas blancas en umbelas terminales y laterales á la par, com- puestas de 4 ó 5 radios sin involucro alguno ; cáliz entero ; corola con 5 pétalos de ápice cordiforme y desiguales, ligulados j algo un- guiculados ; estambres 5 salientes y enderezados; ovario fusiforme terminado por dos estigmas diverj entes : choeropliylhim, F. 149, S.-Or. II, T. III. 1136. Diaquenio pelierizado, cuyo pelo tieso parece púas y con crestas membranosas, 1137. — Diaquenio nunca erizado, 1138. 1137. Planta herbácea bisanual, cuyo tallo derecho, mas ó menos ramoso, estriado y peludo sale de una raiz carnuda, perpendicular, mas ó menos gruesa, alto de 2 á 3' ; hojas alternas, envainadoras por la base, cuyas inferiores son 2, 3vecespinatisectas, con los seg- mentos pinatíñdos, cuyos lóbulos oblongo-lineares son cuspidados, mientras se vuelven mas simples á medida que se hacen mas supe- riores, de manera que las últimas se han puesto laciniadas y casi sentadas : todas son velludas. Flores blancas en umbela compuesta ó algo teñidas de color purpúreo por el centro de las umbelas en donde son estériles, mientras las de la circunferencia algo mas grandes son todas fértiles; hojuelas del involucro foliáceas y multí- fidas, casi tan larga como la umbela, que por fin se vuelve recojida, mientras las de los involúcelos son muchas, enteras ó trífidas ; cáliz de limbo 5-dentado ; corola con 5 pétalos, inclinados, de ápice aco- razonado ó escotado , mayores por la circunferencia que en el centro y pareciendo como radiados. Ovario ovoideo, con dos estilos diver- jentes. Fruto lijeramente comprimido por el dorso, cuyos carpidlos con 4 fajas simples; costillas secundarias aguijonosas y aladas, cu- yas púas en una serie son casi tan largas como el diámetro del fruto oval-oblongo : costillas primarias 5, cerdosas; daucus, F. 149. S.- Or. I, T. IX. ' 1138. Umbela sin involucro alguno, 1139. — Umbela con involu- cro, 1144. 1139. Ptaiz carnosa bastante gruesa, amarillenta interiormente, feculenta y comestible, 1140. — Raiz poco carnosa, no gruesa, blanca ni feculenta ni comestible tampoco, 1141. 1140. Planta herbácea vivaz , con hojas 1, 3-pinatisectas, cuyos segmentos inferiores están partidos en lóbulos aovado-aguzaáos y aserrados. Flores blancas en umbelas compuestas, de cáliz cuyo limbo es obsoleto ó apenas notable; corola con 5 pétalos aovados ó lanceolados, enteros pero con una punta inclinada. Fruto aovado- 412 :\iÉTODO DICOTÓMTCO. oblongo sub-comprimiclo ; carpidios con 5 costiliitas iguales, ente- ras, obtusas; enclospermo asurcado por el lado comisural : arraca- c/ia, F. 149, S.-Or. 11, T. IV. 1141. Pétalos redondeados, enrollados hacia dentro y con un ló- bulo escamoso y obtuso, 1142. — Pétalos sub-redondos, de ápice in- ílexo ó involuto y sin lóbulo ala'uno, 1143. 1142. Planta vivaz de tallo derecho, poco ramoso y lampiño, liso, estriado y con hojas alternas, cuyo peciolo, tanto mas corto cuanto mas superior está la hoja, es envainador por la base, bipinati ó 3- pinatisectas, con muchísimos segmentos capilares, de un olor parti- cular característico. Flores amarillas en umbelas compuestas bien fornidas, iguales, de cáliz algo hinchado con el limbo entero y muy poco pronunciado ; corola con 5 pétalos iguales y enteros; 5 estam- bres salientes, enderezados y algo diverjentes. Ovario oval, de cuyo ápice salen dos estilos diverjentes. Diaquenio casi oval, de carpidios ó mericarpios con 5 costillas salientes obtusas, cuyas laterales, mas gruesas que las demás, están ])ov los hováe^ : fceniculum, F. 149, S.-Or. I, T. II. 1143. Plantas herbáceas bisanuales , de raiz á veces bastante gruesa y comestible, pero siempre blanca, de tallo bastante grueso, lampiño, estriado ; hojas radicales con largos peciolos estriados es- teriormente y con un canal grande y unido por la cara inferior, de base algo envainadora, al principio derechas y mas luego tendidas, pinatisectas, con los segmentos algo cuneiformes, y de ápice dentado ó tríñdo, alternas en el tallo y ramos, en donde se han vuelto laci- niadas y mucho mas pequeñas, de un olor particular característico cuando estrujadas; flores amarillentas en umbelas compuestas; cáliz de limbo obsoleto ; disco corto, cónico y á la par escotado; diaque- nio oval, contraido lateralmente, algo dídimo, de carpidios con 5 costillas iguales y filiformes : apiuon, F. 149, S.-Or. II, T. I. 1144. Un involucro y un involúcelo, 1145. — ün involucro sola- mente ;' planta herbácea anual, de tallo ramoso y lampiño, con ho- jas alternas, cuyas inferiores son bipinatisectas j con segmentos an- chos y dentaditos, mientras las ramales son finamente partidas. Flores blancas en umbelas 3, 5-radiadaS; desiguales, las de la cir- cunferencia siendo mayores; cáliz con 5 dientes desiguales, agudos y persistentes ; corola de 5 pétalos obaovados, bífidos por el ápice doblado, cuyos interiores son mas pequeños; estambres 5. Ovario globoso coronado por los dientes calizinales y de cuyo ápice salen dos estilos diverjentes. Diaquenio globoso, 10-costilludo, apenas bipartible ; mericarpios .con 5 lomas primarias deprimido-flexuosas, las secundarias, en número de 4, están cerca de la márjen, mas preeminentes y aquilladas; vallecillos sin fajas; comisura con dos fajas, olor particular : coriandrum, F. 149, S.-Or. III, T. I. 1145. Planta herbácea bisanual, de tallo mas ó menos ramoso, estriado, lampiño y alto de 2' á 3', derecho, saliendo de una raiz perpendicular poco carnuda y del tamaño como del dedo pulgar ; hojas radicales largamente pecioladas, 3-pinatisectas, con los seg- mentos superiores lanceolados ó trífidos, alternas en el tallo y ra- mas y volviéndose menos partidas á medida que se hacen mas supe- VEJETALES HEIUIAFRODITOS POLIPÉTALOS. 413 riores, de manera que las últimas son lanceolado-trífidas solamente. Flores blanco-amarillentas en umbelas compuestas de involucro oligófilo, mientras el involúcelo es al contrario polifilo, las del cen- tro estériles y solas fértiles las de la circunferencia; cáliz de limbo obsoleto; corola de 5 pétalos sul)-redondos, estrechados en lacinia encorvada; estambres 5, mas largos que la corola; estilos 2, diver- . lentes ; fruto lateralmente comprimido, aovado, sub-dídimo, de mericarpios 5-yugados ó costilludos, cuyas lomas filiformes iguales son laterales y marjinales ; vallecillos con una faja, mientras la co- misura tiene dos; carpóforo bipartido : 'petroselhmm, F. 149, S.-Or. II, T. I. 1146. Ovario semi-ínfero, 1147. — Ovarios parietales ; estambres libres insertos en un disco espesito situado en el ápice del tubo cali- zinal, que se vuelve por fin carnudo y como abayado, conteniendo muchos aquenios huesosos, 1149. 1147. Estambres muchos y poliadelfos insertos por adentro de la garganta del cáliz, con cuyos segmentos alternan, 1148. — Estam- bres libres y en número definido. 1149. 1148. Arbusto ó árbol bajito, con hojas simples, alternas, aserra- das ó sub-enteras, pecioladas, lampiñas, papiráceas, eliptical- oblongas, largas de 5-3" sin el peciolo, que lo es de 2", sobre 20- 22-25"' de ancho, estipuladas, con dos estipulitas lineares y caducas. Flores verdoso-amarillentas en racimos espiciformes, terminales, mas ó menos pediceladas y anchas de como 8'"; cáliz de tubo apeon- zado, cuyo limbo es 6, 7-partido, cuyos segmentos llevan una glán- dula por la base ; corola con 6, 7 pétalos sésiles, cóncavos, obtusos, redondeados v estendidos; de 18 á 24 estambres en 8 andróforos cubiertos de pelo sedoso opuestos á los pétalos y alternando con otras tantas glándulas, llevando 3, 4 anteras cada uno. Estilos 3 ; jdacentas 3. Cápslila unilocular polisperma de deliiscencia medianí- cida 3-valve por el ápice : Iwmalmm, F. 132, páj. 323. 1149. Siempre 5 estambres; 3 estilos y ovario 3-locular ; base del fruto nunca acompañada y envuelta en el limbo calizinal persis- tente, 1150. — De 8 á 12 estambres; estilo único; fruto envuelto por encima de la base por el limbo calizinal persistente, cuya semilla germina en su interior, estando todavía colgando del árbol, y cuya radícula lo agujera para salir afuera.. Árbol de las orillas del mar, lampiño, con raices adventivas que se vuelven troncos, alto de 15 á 25' y á veces 30' de altura, muy ramoso; hojas opuestas, simples, pecioladas, coriáceas, bien enteras, obaovadas, ovales ú obaovado- lancGoladas, obtusas, largas de 5, 4, 3" sobre 3, 2 1|2, 2" de ancho, con estípulas intrapeciolares. Flores axilares pedunculadas y casi en racimitos paucíñoros, de cáliz 5-partido persistente : corola de 4 pétalos lacerado-lanudos por la márjen y mas cortos que el limbo calizinal. Estambres 8 insertos por adentro del cáliz valvar. Ovario bilocular, cuyas celdas contienen dos óvulos colgantes. Fruto mo- nospermo por causa de aborto de los demás óvulos : rhizo^hora, F. 137. 1150. Arl)Ustos ó árboles bajitos, muy ramosos, de ramitas pu- bescentes ó tormentosas, con hojas simples, alternas, pecioladas, es- 414 MÉTODO DICOTÓMICO. tipuladas, aovadas ú oblongas, elípticas ó elíptico-lanceoladas, en- teras ó aserraditas, del todo lampiñas ó de cara inferior alampiñada ó tomentosa. Flores en glomérulos formando cimitas axilares apenas tan largas como los peciolos, de cáliz adherido por la base persis- tente, cuyo limbo abierto y de 5 lóbulos aqiiillados por la cara inte- rior es por fin circonciso ; corola con 5 pétalos espatulados j ungui- culados ; estambres 5, saliendo afuera antes de la antesis completa. Ovario mas ó menos globoso ó cónico 3-locular, anidado en el disco llano, con 3 estilos libres ó reunidos por la base. Fruto capsular formado de. tres cocos ó cajitas abriéndose por el lado interno, cada uno con una sola semilla^ lustrosa, negra y bien pulida : colubrma, F. 124, G. II. 1151. Primorosos arbustos de tallo largo, derecho, cilindrico, mas ó menos aguijonóse, de hojas alternas, compuestas, con estípu- las soldadas á la base del raquis, imparipinadas con tres ó mas ho- juelas, cortamxCnte pecioladas mas ó menos ovales, aserradas, cuya impar es de ordinario mas grande que las laterales, raquis y costilla no rara vez aguíjenosos, cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior, no lustrosa, es con frecuencia pubescente. Preciosas flo- res olorosas terminales, tan pronto solitarias como en especies de cimas; cáliz de tubo apeonzado ó urceolado, con limbo partido en 5 segmentos largos, lanceolados, decduos, de los cuales 2 solos están enteros, mientras los demás son laciniados; corola con 5 pétalos obtusos, redondeados, cóncavos, ob-cordiformes algunas veces, de color muy variado y á veces numerosísimos ; muchos estambres dispuestos en algunas series, desiguales , de filamentos alesnados, derechos y con anteras basifijas. Ovarios muchos, uniloculares, pe- gados en la pared interna del cáliz, mas ó menos ovales y pequeños, peludo-sedosos, terminados por un estilo simple , peludo, un poco lateral, largo y un poco eserto, terminado por un estigma discoideo algo cabezudo. Aquenios huesosos mas ó menos numerosos, peque- ños, sedosos, á veces triangulares y distintos, contenidos en el cáliz vuelto abayado : rosa, F. 13:2, grupo lí. FIN FE DE ERRATAS Pajina Yii, lín. 34, en lugar de historia natural ; de d'OrUgny, léase historia natural de d'Orhigiiy. VIH, lín. 1, en lugar de hiuth, léase hunth. XI, lín. ultima, léase de los rudimentos d.e las rocas calcáreas y con la incesante acción de los vejetales ; hasta que, j quitarla pues de la páj. Yii, línea última también. XXIX, lín. 16, en lugar de en que nace, léase que nace. XXXIV, lín. 14, en lugar de los que se dele, léase lo que se dele. XXXV, lín. 9, en lugar de hacen, léase hacer. XXXVIII, lín. 14, en lugar de pectórico, léase pectósico. XLVí, lín. 17, en lugar de quelastomdceas, léase melastomdceas . 83, lín. 7, en lugar de retinervias, léase rectinervias. 84, lín. 11, en lugar de alhejaca, léase alhajaca. 92, lín. 11, en lugar de asoldadas, léase ó soldadas. 106, lín. 33, en lugar de umlelical, \éasQ ttmhilical . 109, última línea, en lugar de con mas irecuencia, léase con mas frecuencia. 116, lín. 44, en lugar de cupiliforme., léase cwpuliforme . 129, lín. 46, en lugar de endoplema, léase endopleura. 131, lín 43, en lugar de y la iguala, léase y les iguala. 134, lín. 33, en lugar de qice se esperimentando en la, léase que se va esperimentaíido la. 153, lín. 8, en lugar de con los cuales, léase con que. Id., lín. 38, en lugar de auguria, léase anguria. Id., lín. 42, en lugar de roehmeria, léase hoehmeria. 157, lín. 23, en lugar de asparijineas , léase asparajineas. Id., lín. 36, en lugar de superov áridos, léase superovariados. 162, lín. 12, en lugar de oacao, léase cacao. 181, lín. 15, en lugar de ¿.interna, del cual se las halla formadas, etc., léase é interna del cual se las halla, formadas, etc. 184, lín. 21, en lugar deforman, lésLse formar. 191, lín. 46, en lugar de carnúcitla, léase car uncida. 199, lín. 35, en lugar de mas ó menos, 5 lobadas, léase mas 6 menos 5 lobadas. 202, lín. 9, en lugar de afuera de, léase afuera. 206, lín. 46, en lugar de 5 senta ; dos son, léase o-sentados son. 209, lín. 15, en lugar de 116", léase 16". 215, lín. 9, en lugar de amento ó estrohiliforme, léase amento estro- hiliforme. 416 FÉ DE ERRA.TAS. 226, lín. 30, en lugar de carpidlos^ drupáceos^ léase carpidios dru- páceos. 238, lín. 7, en lugar de son espiguitas, léase son en espiguitas. 241, lín. 44, en lugar áeperiantie, léase ¡periantio. 246, lín. 11, en lugar de acompoAcadas, léase acompañadas. 250, lín. 44, en lugar de caroliforme, léase coroUforme. 251, lín. 42, eniugar de terminada, léase terminado. 260, lín. 41,. en lugar de ceboUota, léase cebolleta. 265, lín. 31, en lugar de tienen al aspecto, léase tienen el aspecto. 292, lín. 22, en lugar de cápsula, léase copula. 302, lín. 12, en lugar de y de dos cuales 2, etc., léase y de los cuales dos, etc. 307, lín. 8, en lugar de aurejitas, léase orejitas. 308, lín. 20, en lugar de aguzacitas, léase aguwditas. 310, lín. 12, en lugar de envueltas, léase envueltos. Id.,. lín. 14, en lugar de vario, léase varia. Id., lín. 24, en lugar de esterieres, léase esteriores. 314, lín. 3, en lugar de adheridas, léase adheridos. 324, lín. 23, en lugar de apéndice, léase dpiice. 325, lín, 24, en lugar áe piirenas, oltusamente, \ésií>e pirenas oltusa- mente. 329, lín. 23, en lugar de especiformes, léase espiciformes. 344, lín. 32, en lugdiV de ¿Jetdgonas, \(í2l^q pentágonas. 346, lín. 45, en lugar de especiformes , léase espiciformes. 352, lín. 42, en lugar de desparradas, léase desparramadlas. 366, lín. 41, en lugar de dispues toasen, léase dÁspucstas en 368, lín. 33, en lugar de colora, léase corola. índice general del tomo i. Abreviaturas. Absorción, respiración, etc. Aguijones (de los). Albumen (del). Andróforo idel). Anfisarca (de la). Antigüedad del reino veje- tal. Antera (de la). Anteridios (de los), Aquenio (del). Arilo (del). Arquegonios (de los). Astil I del). B Baya (de la). Bellota (de la). Brácteas (de las). Bulbo ó cebolla del). G Caja. Calículo del) Cáliz (del). — supero, semi-ínfero, ín-- fero. Caña (de la). Cápsula ^de la). Carcérulo (del). TOMO I PU'J. X 93 •78 121 116 145 XI 114 127 143 129 148 T2 145 144 91 •77 145 92 119 121 72 145 144 sobre la los veje- Cariópside (del). Carúncula (de la^. Cinarrodon (del). Clasificación de los frutos. — de los vejetales. Conectivo (del). Consideraciones nutrición de tales. Corola ^^de la). — monopétala. — polipétala. — catapétala. Cotiledones (de los). • D Datos históricos sacados de la botánica. Definición de la botánica. Dehiscencia de los frutos. — septícida,loculícida, se[j- Parj. 143 129 144 143 150 144 XIX 121 122 123 124 132 XV 60 142 tífraga. — valvar. Disco (del). Discurso preliminar. Documentos. Drupa (de la). 142 141-142 118 XI 1 143 E Elaterio (del). Embrión ^del). ■ — homótropo antítropdj 27 145 130 418 ÍNDICE GENERAL DEL TOMO 1, Pag. antítropo y heterótropo. 131 Endospermo (riel;. 127 Envenenamiento de los ve- ietales (delV xxxrx Envoltura suberosa .de la). /O — herbácea. 71 Epidermis (de laj. 69 Eícreciones (de las). 95 Espata (de lal. 92 Espinas (de las\ 78 Esporanjios de los . 148 Esporos ;de íos^;. 148 Estambre idel). 111 — monadelfos, diadelfos, poliadelfos, didínamos, tetradínamos. 117 Estaminodios (de los). 115 Estigma (del). 111 Estilo (den. 109 Estípulas (de las). 90 Estivacion (de la). 102 Estróbilo (del). 145 Eterio (del). 144 Evaporación (de la). 95 F Fecundación (de la). 143 Filamento ^del). 116 Fillodio (del). 93 Flor (de la). 97 — hermafrodita , mascu- lina, femenina, monoica, dioica. 98 — monandra, diandra, po- liandra, isostemone , di- poste mone ó polistémone. 117 — ginandra. 116 Frutos (de los). 137 G Generación (de la). 96 Geografía botánica. xl Germinación (de la), xxvíii-134 Ginostemo .del). 116 Glándulas 'de las). 80 Gluma (de la). 93 H Paq. Herbarios (de la prepara- ción de los). 1, Herborizaciones de lasi. l Hesperidio (del). 145 Hojas (de las). 81 — simples. 84 — compuestas. 88 Huevecillos de losj. 105 Inflorescencia (de la). 98 — axilar. 98 — terminal , mista , anó- mala. 101 Inserción de los estambres (de la). — hipojínica, perijíniea. — epijínica. 117 — hipoperijínica 118 Involucro (del). 92 Jaleas vejetales (de las), xxxvir L Legumbre íde la). 143 Lentejillas (de las). 80 Ley de las analojías botá- nicas. XVI M Madera 'de la). 71 Maduración de los frutos, xxxv Médula (de la'. 71 Melónida ide la). 145 Método natural de A. L. de Jussieu. 154 — analítico y dicotómico. 165 I Nectarios (de los). Nuculanio (del) . 118 145 índice general del tomo i. Nuez (de la). Pag. 143 O Odrecillo del). Organografía. Órganos reproductores de los A^ejetales criptóga- mos. — de la nutrición y de la vejetacion de loscriptóga- mos. Ovario ídel). — libre ó supero , adhe- rente ó infero , parietal. 143 66 147 146 107 117 Paralelo entre los vejetales j los animales. 61 Peciolo (del). 81 Pedúnculo ídel). 102 Pelos (de los). 79 Peponida (de la). 145 Periantio ó perigonio ídel'. 119 Pericarpio (del). 139 Periclinio ó periforantio. 92 Perispermo (del). 127 Plantas parásitas ( de las ) tocante á la agricultu- ra. XXXVIII Pifia (de la). 145 Pistilo (delj. 81 Pixidio (del). 145 Polaquenio (del. 144 Polen ideli. 111 Prefloracion (de la . 102 Prefoliacion (de la). 76 Prólogo. * VII Propagación artificial de los vejetales. xxxii — por estaca , esquejos ó cogollos. xxxm — por magullo ó acodo, xxxii — por injerto. xxxii lA Raicita (de la). 131 Raíz ¡de la). Resumen de botánica ele- mental. Rizoma ó cepa. S Sámara ¡de la). Samaridio (del). Semilla (de la), — madura. Sicono (del). Silícula (de la). Silicua (de la). Sincarpio (del). Sistema de Linneo. Sorosis (del). 419 Parj. 66 59 73 153 144 126 128 146 145 144 144 150 146 T Tallito (del). Tallo (del). — lejítimo. Taxonomía. Tronco (del). 133 69 73 150 69 U Utilidad de los vernales para la existencia'de los animales. xxii V Vejetales acotiledóneos, co- tiledóneos, mono(;otiledó- neos, dicotiledóneos. 133 Y Yemas, bulbos j tubércu- los. 75 Yemecita ó plumilla 'de lai. 133 Zarcillos íde los',. 78 índice de los géneros EN F.k MÉTODO DIGOTOMIGO A Pag. - Pag. Alpinia. 474 Areca. 100 Pag. Alternanthera. 377 Argemone. 872 Abelmoschuíí, 970 Amaranthus. 197 Aristolochia. 420 Abies. 104 Amarillis. 455 Artante. 315 Abrus . 1044 Amblogine. 198 Artocarpus. 113 Absinthium. 774 Amomum. 473 Arando. 332 Abutilón. 965 Amyris. 996 Asclepias. 664 Acaljpha. 152 Anacardium. 277 Asophila. 246 Acacia. 298 Anda. 128 Aspidium. 76 Aceiitobium. 223 And ira. 1082 Avena. 329 Achyrantes. 378 Andrographis . 496 Averrhoa. 566 Acnistus. 627 Andropogon. 258 Aydendron. 357 Acroclidium. 358 Angraecum. 439 Acrocomia. 95 Aneimia. 81 B Acrosticum. 57 Angelonia. 541 Adansonia. 954 Anguria. 239 Bactris. 102 Adenanthera. 284 Anona. 900 Bambusa. 324 Adhatoda. 496 Andda. 966 Basella. 390 bis Adianthum. 66 A n red era. 405 Batis. 244 Agaricus. 22 Anthurium. 309 Bauhinia, 945 Agati. 1059 Antidesma. 219^/5 Befaria. 692 Agave. 460 Apeiba. 897 Begonia. 528 Agrostis. 328 Apium. 1143 Beurreria. 608 Alectra. 544 Arceiitobium. 233 Bidens. 795 Aleurites. 120 Arachis. 1043 Bignonia. 177 Allamanda. 580 Arrhostoxy- Bixa. 890 Allium. 414 lum. 233 Ms Blettia. 433 Aloe, 413 Arracacha. 1140 Blechnum. 535 -it'¿'¿ índice df. los géneros Pag. Pag. í^«í/. Bligliia. 851 Casearia. 314 Cococipselum. 108 Bocconia. 315 Cassia. 1019 Coceuliis. 241 Bcprhaavia. 386 Casuarina. 211 Coífea. 138 Bcehmeria. 196 Catliartocarpus. 1005 Colocasia. 1, 59 Ms Boletus. 24 Catasetum. 444 Colubrina. 1150 Bonplandia. 838 Catalpa. 526 Commelina. 410 Bontia. 551 Cattleva. 434 Coniocladia. 215 Borraao. 612 Cecropia. 212 Coiiferva. 14 Borreria. 104 Cedrela. 942 Conocarpus. 383 Borrichia. 803 Celosia.* 401 Convolvulus. 583 Brassica. 829 Celtis. 212 Copaifera. 392 Bromelia. 462 Ceramium. 11 Cordia. 601 Brosimum. 114 Cereus. 1102 Corchorus. 891 Brownea. 934 Centrolobium. 1034 Coriandrum. 1144 Brimsíelsia. 553 Cerefolium. 11 Coumaruna. 1036 Bryophyllum. 611 Ceplialanthus. 695 Coutubea. 514 Bucida. 389 Ms Centrosema. 1016 Coutarea. 114 Bumelia. 641 Cerosantiies. 181 Craniolaria. 541 Bursera. 214 Cestrum. 626 CratoeTa. 880 Byrsonima. 949 Cetraria. 34 Crescentia. 556 Bvtneria. 908 Chenopodium. 400 ^Criiium. 454 Chicorium. 169! Criptocarrya. 119 G Chioccoca. 131 Critonia. 119 Clileianthes. 64 Crotalaria. 1045 Ca^plia^lis. 141 Crysanthellum. 804 Crotón. 141 Ca^salpinia. 1016 Clirysobalanus. 1023 Cubeba. 232 Cajanus. 1015 Crysophyllum. 629 Cucumis. 191 Cakile. 832 Cicca. 150 Cucúrbita. 193 Caladium. 161 Cinchona. 119 Cupania. 852 Galea. 192 Cinnamomum. 353 Cúrcuma. 416 Calliandra. 291 Cinnamodendron. 921 Cuphea. 1022 Calotropis. 663 Cionandra. 192 Cuscuta. 585 CalophjUum. 811 Cionosicys. 190 Curcas. 146 Calyptranthes. 1119 Cipura. 461 Cyatbea. 53 Cameraria. 650 Ciperus. 341 Cynosurus. 335 Caniphora. 360 Cisampelos. 240 Cypripedium. 421 Cananga. 899 Cissus. 815 Cytharexyllum . 560 Canella. 940 Citrullus. 185 Cyrthopodium. 443 Canna. 481 Citrus. 911 Canavalia. 1081 Cladonia. 30 D Camponianesía. 1121 Clavaria. 25 Capparis. 883 Clematis. 411 Dactylis. 336 Capraria. 510 Cleome. 825 Danea. 83 Capsicum. 620 Clerodeiidron. 559 Daphnopsis. 218 Carapa. 929 Clidemia. 1090 Daucus. 1131 Cardiospermum. 849 Clusia. 814 Davila. 891 Carica. 204 Cochlospermum. 889 Desmodium. 1056 Carolinea. 950 Coccoloba. 881 Detiota. 15 CaryophjUus. 11]5 Coccos. 91 Devenischia. 405 EN EL MÉTODO DICOTOMICO. 423 Pag. Pag. Pag. Digitai'ia. 255 Fucus. 16 Hygi'ophylla. 533 Dieffenbachia. 156 Dipholis. 640 G I Dianthera. 497 Dicksonia. 63 Gaulteria. 679 Ibatia. 667 Dioteorea. 243 Genipa. 728 Ichthyothere. 773 Diospiros. 301 Geoplijlla. 744 Icica. 998 Diplazium. 79 Gerardia. 543 Ilex. 821 Dolichos. 1069 Giiaplialium. 789 lllicium. 896 Dodonea. 278 Goiiolobus. 666 Iiidigofera. 1060 Dor^tenia. 167 Gossipium. 931 Inga. 1047 Diodia. 702 Gomphrena. 404 lonidium. 819 Doyerea. 183 Gouania. 1093 Inopsis. 434 Dracontium. 307 Gramnitis. 61 Ipomea. 582 Drymaria. 822 Guachamaca. 611 Isotoma. 687 t' • Guazuma. 922 Iresine. 254 K Guavacum. Guetarda. 863 751 Iriartea. 94 Echinodorus. 889 Guilandina. 1010 J Eeliites. 654 Guilelmia. 101 Eclipta. 801 G j m n 0 gr a m m e . 61 Jacaranda. 530 Elais. 96 Jacquinia. 616 Elepliantopus. 806 H Jambosa. 1119 Enkea. 317 Janipha 135 Enterolobium. 1051 Habenaria. 429 Jarilla. 773 Entada. 283 Hamelia. 732 Jasminium. 492 Epipactis. 424 Hecatophyllum. 1084 Jatropha. 134 Eqiiisetum. 41 Hediosmum. 139 Juglans. 140 Eriodendron. 918 Hedwigia. 997 Junip(*r-us. 103 Erithrina. 1080 Heliconia. 447 Jussiea. 1092 Ervngium. 1131 Helicteres. 915 Justicia. 498 Erythalis. 753 Heliotropium. 671 Erjthroxylum. 950 Helosis. 165 K Eugenia. 1125 Hematoxyllum. 1014 Eupatorium. 777 Hemitelia. 52 Krameria. 975 Euphorbia. 133 Hemionitis. 59 Koempferia. 478 Euphoria. 855 Hernandia. 142 Kyllingia. 339 Eustoma. 594 Herpestis. 539 Euxolus. 199 Hibiscus. 272 Ti Exostemma. 719 Hidnum. 23 t Evernia. 35 Hippocratea. 984 Lablab. 1070 Hippomane. 123 Lactuca. 770 h' Hiptis. 563 Lagetta. 390 Holchiis. 259 Lagenaria. 188 Fagara. 835 Homalium. 1149 Laguncularia. 269 Fevilea. 237 Hura. 126 Lantana. 550 Flacourtia. 544 Hydrocotile. 1133 Lawsonia. 993 Fceniculum. 1142 Hymamea. 1006 Leonitis. 523 Ficus. 111 Hypoxis. 464 Leonurus. 520 42-1 índice de los géneros Pag. Po§. Parj. Leopoldina. 93 Mickania. 780 Ocymun. 516 Leria. •765 Micromeria. 519 Okienlandia. 707 Lepidium. 833 Mimosa. 288 Olea. 489 Lencas. 522 Mimusops. 638 Omphalea. 121 Leucíena. 289 Mirabilis. 397 Oncidium. 440 Libidibia. 1018 Mollugo. 382 Ophyoglossum . 82 Limnanthemu] 11. 588 Momordica. 180 Opuntia. 1113 Lippia. 510 Modiola. 960 Orchis. 430 Lindsaea 70 Monodora. 858 Oriza. 321 Lisianthus. 600 Mongorium. 491 Oreodoxa. 99 Lobelia. 689 Monniera. 669 Oreodaphne. 225 Lonchitis. 67 Monstera. 253 Osmunda. 78 Lúcuma. 634 Montrichardia. 158 Ottonia. 318 Luífa. 179 Mora. 935 Oxalis. 836 Lycoperdon. 26 Morinda. 742 Lycopersicum. 624 Moringa. 1001 P L3^copodium. 47 Morinsonia. 880 Ljgodium. 80 Moronobea. 938 Pachyphyllum . 437 Morus. 136 Pachirrizus. 1072 M Moschoxyllum. 932 Palicurea. 747 Mucuna. 1054 Pancratium. 452 Madura . 220 Muntingia. 884 Pandanus. 206 Macrocnemum . 708 Murraya. 866 Panieum. 337 Malachra. 964 Musa. 448 Paritium. 972 Ms Malla. 463 Mygenda. 985 Parkinsonia, 1012 Malpighia. 948 Myrica. 214 Parmelia 34 Malvastrum. 959 Myristica. 215 Parthenium. 782 Malvaviscus. 955 Myrodia. 920 Passiflora. 1085 Mammea. • 876 Myrospermum. 1008 Paullinia. 858 Manettia. 720 Pavonia. 963 Marantha. 480 jsr Pedilanthus. 131 Mangifera. 273 Pelexia. 426 Marattia. 83 Nasturtium. 830 Peltidea. 32 Marcgravia. 683 Nectandra. 359 Pentaclethra. 285 Marchantía. 40 Nelombo. 415 Peperomia. 311 Marsdenia. 661 Nephrodium. 75 Perescia. 1104 Martynia. 546 Nephrolepis. 75 Persea. 224 Marsilea. 49 Nerium. 656 Petiveria. 385 Mauritia. 204 Neurolsena. 790 Petroselinum. 1145 Maxilar ia. 441 Nicotiana. 599 Pharnaceum. 382 Maximiliana. 92 Nimphea. 416 Pharbitis. 582 Melia. 941 Nonatelia. 733 Pharus. 171 Melicoca. 854 Nostoc. 14 Phaseolus. 1077 Melochia. 911 Nothoclena. 58 Philocorine. 164 Melothria. 193 Ms Notylia. 435 Philodendron. Vo^lis Meniscium. 62 Phoebe. 356 Mentha. 564 O Phoenix. 205 Mentzelia. 1129 Phoradendron . 233 Ms Meriana. 1021 Ochroma. 919 Phvsalis. 618 EX EL MKTODO Dl( OTO-MICO. 425 Pag. Pag. Pag. Plivllantlms. 149 Ranuneulu.<, 897 Ms Sida. 967 Phjtolacca. 361 Rauwolfia. 644 SideroxjUon. 636 Phjloxerus. 403 Remirea. 325 Simaba. 864 Picroena. 272 Rinchosia. 1066 Simaruba. 230 Picroemnia. 227 Rhizopliora. 1149 Singorium. 177 Pilea. 196 Rhu^. 988 Sinapis. 130 Pimenta. 1122 Richardbonia. 700 Siphonia. 127 Pinus. 105 Rieinus. 144 Sisirincliiiiiii. 468 Piper. 310 Rivina. 362 Slevogtia. 593 Piptadeiiia. 281 Roecelia. 35 Sloanea. 415 Piscidia. 1041 Rosa. 1151 Smilax. 236 Pisonia. 302 Rosmarinus. 560 Solanum. 622 Pistia. 154 Rondelettia. 717 Sonchuü. 768 Pithecolobium . 1050 Ruellia. 534 Sorghiim. 260 Plantago. 567 Rumex. 247 Spatiphvllum 308 Pleurothalis. 431 Ruta. 839 Spcrmaeocee. 705 Plocamium. 17 Spermoedia. 28 Pluchea. 782 S Spigelia. 597 Plumbago. 570 Spilanthes. 799 Plumeria. 653 Saccliarum. 326 Spondias. 276 Poinciana. 1017 Sagittaria. 174 Siachitarpha. 509 Polígala. 975 Salix. 213 Sterculia. 265 Polygonum. 384 Salvia. 501 Stnimphia. 718 Poljpodium. 62 Sambucus. 734 Stryclinos. 614 Porophvllum. 798 Sapindus. 853 Sweiteinia. 943 Portlandia. 722 Sapium. 125 Portulaca. 1127 Sapota. 635 T Pontederia. 412 Ms Sarcostemma. 658 Potalia. 680 Sargassum. 16 Potamogetón. 306 Sasafras. 223 Taberníemonta- Potomorphe. 316 Sauvagesia. 820 na. 652 Prioria. 393 ScfeYola. 719 Taenitis 58 Prosopis. 280 Schilleria. 319 Talauma. 894 Ms. Prunus. 1024 Scliizaea. 82 Tamarindus. 1039 Psichotria. 746 Schmidelia. 267 Tanascium. 555 Psidium. 1112 Scliultesia. 575 Tecoma. 531 Pteris. 71 Scilla. 413 Tephrosia. 1083 Pterocarpus. 1033 Scirpus. 342 Terminalia. 270 Púnica. 1106 vSco/opendrium . 73 Tespesia. 969 Scoparia. 572 Tetracera. 896 Ms. Q Scutellaria. 515 Teucrium. 512 Schnella. 859 Theobroma. 923 Quassia. 865 Schoenus. 340 Theophrasta. 262 Sechium. 184 Thevetia. 610 R Secudiraca, 976 Tilandsia. 459 Serjania. 846 Tournefortia. 605 Raiania. 242 Sesamum. 540 Tradescantia. 411 Randia. 729 Sesuvium. 380 Tragia. 151 Raphanus. 828 Bicana. 185 Trianthema. 381 426 ÍNDICE DE LOS GÉNEROS EX EL MÉTODO DICOTÓMICO, Pat¡. Pag. Pag. Tribiilus. 861 ürvilea. 847 Warszeiiwiezia. 723 Trichilia. 931 Usnea. 33 Tricboraanes. 77 "¥"T* X * IVichoísantes. 190 V Triumphetta. 867 Vachelia. 296 Xanthosoma. 160 Trophis. 221 Valeriana. 694 Xilopia. 898 Ms. Tropagolum. 843 Vanilla. 422 Ximenia. 842 Tuber. 27 Vargasia. 791 Tupa. 690 Veratrum. 418 Z Turnera. 819 Verbena. 418 Typha. 163 Vernonia. 807 Zamia. 231 Verónica. 495 Zanthoxyllum. 229 U Vigna. 1073 Zea. 172 Vinea. 648 Zingiber. 477 ülantha. 427 Vitis. 818 Ziziphus. 989 Ulva. 13 Vittaria. 73 L Zjgophjllum. 860 Urena. 962 "^ — T* "7" Urera. 249 w Urtica. 250 Waltheria. 910 Paris. — Imprenta (Íp Poiipart-Davyl y Ca.. call« du Rnc, 30. EL MÉDICO BOTÁNICO CRIOLLO =-&♦< PARTE PRIMERA FLOKA MEDICA Y DTÍL DE LAS ANTILLAS Vsih. -— Imprenta de roupart-Davyl y Ca, calle dii Bac, 30. EL MÉDICO liOTÁNKlO CRIOLLO POR D. Renato de GROSOURDY DOCTOR EN MEDICINA DE LA FACULTAD DK MEDICINA DE VAKIíí rX-KEPETlDOR DE QUÍMICA EN LA MISMA FACULTAD, EX-PROFESOR PAUTTCLLAU DE QUÍMICA Y BOTÁNICA MÉDICAS EN LA MISMA CIUDAD SOCIO CORREíiPONSAL DE VARIAS CORPORACIONES CIENTÍFICAS FRANCESAS Y ESTRANJERAS PARTE PRIMERA FLORA MÉDICA Y ÍJTIL DE LAS ANTILLAS Y DE LA PARTE CQRRESPONDÍSIÍTE DEL COííTINENTE AMERICANO TOMO II Conteniendo las familias y terminando por dos apéndices , uno sobre las maderas útiles de esos paises y otro sobre la agricultura apropiada á ellos. Las plantas de un género tienen igui)Ic!> jíropiedaiirs , las que están en un órJen muy natural se asemejan también por la> propieiiadeí. ; las que se hallan en una clase o familia natural Ne corresponden igualmente ^ A ^ ^J O T 4 W í O A I parís ^'^ librería de francisco brachet H, CALLE DE l'abBAYE, 8 1864 DIVISIÓN PRIMERA VEJETALES AOAMOS CRIPT0GAM08 o AGOTILEDOXEOS SECCIÓN I CLASE I. — ALGAS Familia V. — ALGAS, THALASOPHITAS 6 FICE AS. — Se han dado esos varios nombres á unos vejetales celulares des- „ provistos de flores y que se alimentan por absorción, la cual se ve- ^ rifica por toda su superficie y á espensas del medio ó centro en que vaivén, que es ordinariamente el agua, tan pronto dulce como sala- da ; algunas se han hallado en las aguas termales j una sola clase C\*nace en ciertos líquidos fermentados. Algunas veces se encuentran Q^en la superficie del suelo húmedo y en ese caso viven en el aire. Se Uj presentan con forma sea de cuerpecillos microscópicos provistos de &^ una envoltura silícea ó sin ella, sea de filamentos sencillos ó mem- branosos mas ó menos desarrollados; por último, su forma se acerca mas de la de los demás vejetales: tienen ramos y como hojas. Su color ordinariamente es bruno, aceitunado ó verde, otras veces va- ría entre el rosado mas pálido y el morado subido. Esos vejetales no tienen raices lejítimas, ni tallos, ni hojas propiamente dichas, porque todos estos órganos' están confundidos en uno solo de tamaño y de forma muy variados por supuesto, llamado fronde ó talludo. El principal carácter con que se diferencian de los demás vejetales agamos consiste en la presencia en ellos de órganos reproductores yemaceos, llamados gonodias, los cuales son compuestos de una ve- siculita membranosa llena de una mucosidad organizable verde ó de color bruno. Tales plantas son vivíparas ó se propagan : 1° por medio de esporos desarrollados por su superficie, á veces nacidos en su capa cortical, otras veces están contenidos en su interior y en conceptáculos cuya forma y posición son muy variadas; 2" al favor TOKO II i 2 DIVISIÓN PRIMEEA. AGAMOS. de zoosporos libres ó agrupados que en ese último caso comunican á la ramita que los lleva una forma particular. Los órganos reproduc- tores de etas plantas se reducen en último análisis á una ó algunas celdillas privilejiadas cuyo endócromo, dotado de un color mas vivo ó diferente del de la celdilla, toma un desarrollo relativamente mayor, v llegada ya la madurez se desprenden espontáneamente de la celdilla vecina para irse á germinar y á reproducir por consi- guiente un individuo enteramente igual á la planta madre. Se pro- pagan además estos vejetales por propágulas ó yemas; en las con- fervas, en efecto, cada endócromo puede considerarse como una yema capaz de vejetar por sí sola, dando nacimiento á una planta 'semejante á la de que ha salido; la facultad de reproducción por divifcion se halla muy desarrollada en las vauquerias, cuyos frag- mentos se vuelven con prontitud individuos distintos y perfectos ; se multiplican también por prolificacion , es decir, que en lugar de sacar su oríjen del desarrollo de una celdilla única, como las yemas, proviene de la concentración de la acción orgánica hacia uno ó al- gunos puntos del vejetal, de tal manera, que mucho se acerca á la ramificación ; por último, la propagación es fiscípara ó por separa- cian.y .división de los cuerpecillos , como sucede para las algas mas inferiores, las diatónicas por ejemplo. Hemos dicho mas arriba que esas plantas son vivíparas, en efecto, los zoosporos, llegada la ma- durez ó la sazón de la reproducción, principian por moverse dentro de la celdilla que los contiene ó después de salidos de ella y siguen moviéndose con velocidad en el agua durante algún tiempo, hasta que se peguen en uno de los cuerpos inmediatos, y entonces no tar- dan en germinar, desarrollarse y volverse una planta igual y seme- jante á la de que se han desprendido. La pequeñita alga llamada Protococcus plíívialis, produce un zoosporo que toma la forma de un infusorio, Anastasia nhalis, que á su vez da nacimiento á una alga; tales seres son pues el punto de transición del reino vejetal al reino animal, y tomando en mayor cuenta y consideración los hermosos trabajos del señor Herschberg y las consideraciones del célebre profesor Nees d'Esembeck sobre los movimientos fitonómi- cos, se admitirla un reino de infusorios partidos en dos órdenes, es decir en Microfitos y en Microzoarios, y así se acabarla con las du- das sobre la transformación de las plantas en animales y de los ani- males en plantas, que todavía tienen á los sabios divididos ne dos campos. Ordinariamente estos vejetales son vivaces, aunque bastantes tengan una vida muy corta y efémera, y bien que secos desde ya tiempo vuelven á aparecer vivos al mojarlos. Tales seres crecen generalmente con bastante prontitud, y ciertas algas de las aguas dulces, las vauquerias y las oscilatorias por ejemplo, se desarrollan con mucha rapidez, puesto que con el microscopio se puede presen- ciar su desarrollo, que es maravilloso en las oscilatorias de las aguas termales, y casi siempre en relación con la velocidad de sus movimientos. El tamaño de las algas es muy variado y se halla entre los dos es- tremos,biguientes : 1/300 de milímetro para el protococcus atlanti- CLASE I. — ALGAS. ó etts, mientras que el mucrocystis pirifera tiene 500 metros de largo, Se hallan en las temperaturas mas estremas y hasta opuestas, y sin embargo pueden vivir y propagarse en los lugares que ocupan ; en efecto, se las halla en medio de las nieves perpetuas de los polos y de las montañas mas elevadas del globo, hemetaccus nixalis, como en las fuentes termales cuya agua tiene de -\- 40° á -f- 90° termomé- tricos de calor, analoena thermalís ; se crian sin embargo con ma- yor abundancia en los paises templados y hasta frios que en los cá- lidos. Habitan las aguas dulces y saladas, y ninguna puede vivir largo tiempo fuera de dichas aguas ; pero el mar, los lagos y los rios no son los únicos lugares que las contienen; en efecto, en todas par- tes en donde haya durante algún tiempo agua ó humedad está uno seguro de hallar alguna alga. Según el señor Payen, los TJialassiofUos contienen cantidades mas ó menos considerables de inulina, sustancia que contribuye á darles bastante consistencia conservándoles á la vez mucha flexibilidad. La materia orgánica forma lo§ 0,835 de su parte seca ó los 0,208 del peso total del fucus en su estado normal ó recien sacado del agua. Su parte inorgánica se compone de oxalato de cal, de sulfato y fos- fato de la misma base, de silice, de cloruro de sodio y de potasio, de sulfato de potasa, de yoduro y de bromuro de potasio y de magne- sio; mientras que su parte orgánica es formada de celulosa que constituye la trama de las celdillas y se presenta bajo varios esta- dos diferentes ; la forma mucilajinosa se llama gelin, del cual se di- ferencia la fucina solo porque al aire se vuelve bruna ; 2° de inulina; 3° algunos cuerpos grasos azoados en proporción de 12 á 24/100 del peso de la sustancia orgánica ; 4^ de materia azucarada manilo ó glucosis ; 5° de otras sustancias grasas ; 6° de un aceite esencial ; 7» por ñn, de uno ó dos principios colorantes. Análisis dicotómico de ese gncpo natural que comprende algunas sub -familias ¡/ hasta familias distintas. 1. Cuerpecillos ó cuerpos mas ó menos vesiculosos angulosos ó no, 2. — Cuerpos celulares ó tubulares nunca jamás vesiculosos ni angulosos, 4. 2. Cuerpos angulosos cristalinos , fragmentarios con ó sin envol- tura silícea, provistos de celdas y propagándose por separación es- pontánea, 3. — Cuerpos vesiculares filamentosos ó membranosos, multiplicándose por zoosporos engendrados en su interior y á es- pensas de la sustancia verde ; Conferváceas. 3. Individuos bien libres angulosos, provistos de una coraza silí- cea ó sin ella, ó encerrados en tubitos calizos. Diatómeas. — Indi- viduos cilindricos sin coraza silícea ninguna. Desimidieas. 4. Celulares ó tubulares nunca simétricos, 5. — Siempre tubula- res y simétricamente ramosos , multiplicándose por medio de un núcleo espiral lleno de una sustancia como sebácea. Charáceas. 5. Propagándose por esposos simples formados en su superficie, Fucáceas. — Propagándose por tetrasporos. Ceramieas. 4 DIVISÍOX PRIMERA. AGAMOS. Suh-familia 1^ — Diatomáceas, Agh.; Chaodíxeas y Fragil- LARIeÁs, Endl. — Consisten en cuerpecillos ordinariamente pris- máticos y rectangulares, desnudos ó contenidos en un tubo gelati- noso simple ó ramoso, aislados ó agrupados y reunidos en filamentos libres ó pegados de los cuerpos vecinos, sésiles ó pediculados, pro- vistos de una envoltura silícea diáfana, quebradiza, pero que no se deforma por la desecación y contiene una sustancia mucosa de color aleonado amarillento ó rojizo; son seres acuáticos que tienen en las especies libres un movimiento rastrero que se efectúa en el sentido de su eje lonjitudinal. Se reproducen por medio de esposos ó por separación lonjitudinal ó deduplicacion de los artejos; en cierta época de su vida esos cuerpecillos presentan pues el fenómeno de su división espontánea lonjitudinal, la cual da nacimiento á dos indi- viduos al principio mas delgados, pero que no tardan en tener el tamaño y la forma del corpúsculo de donde han salido. Esta dedu- plicacion se manifiesta por una línea ó estría lonjitudinal que apa- rece sobre la parte media de la envt)ltura por donde se separan las dos mitades. Estos seres viven en los mares y las aguas dulces, y las mismas especies se hallan á la vez en las comarcas del mundo mas lejanas y apartadas las unas de las otras, y necesitan muy poco tiempo para desarrollarse y multiplicarse en cantidad espantosa en las aguas en que aparecen y se establecen. Su coraza ó envoltura si- lícea constituye en ciertos lugares de Europa depósitos fósiles que se esplotan y que suministran la sustancia que se conoce en el co- mercio con el nombre de Trípoli y que aprovechan las artes para el pulimento de los metales. Tribu 1. — Frustulieas. — Individuos nunca inclusos en tubos. Diatoma tenue, Agh. Cba. Tribu 2. — Hydrolineas. Individuos inclusos en tubos. Siti-familia 2. — Dismidieas. — Algas microscópicas con forma de cuerpecillos formados de dos semi-esporos opuestos reunidos por la base y de figura muy variada; los unos son aislados, ovales ó re- dondos, enteros ó lobados, múticos ó provistos de apéndices espino- sos; los otros, reunidos por series en forma de filamentos, tienen una envoltura membranosa que se deforma con la desecación y está llena de un endocromo verde, de figura de estrellitas con muchos brazos , cuya superficie lleva granitos redondos á veces bastante gruesos, esparcidos por ella, contenidas estas estrellitas en una capa de mucus mas ó menos espesa. Se propagan á favor de un esporo redondo, liso ó espinoso, formado por la concentración del endocro- mo resultando de la reunión de dos cuerpecillos; esta especie de co- pulación se verifica en el punto de soldadura de los hemisomates mellizos; se propagan además por reduplicación de cada hemiso- mate; se llama así á los dos lóbulos ó celdillas que constituyen un cuerpecillo ó uno de esos vejetales. En la base de cada hemisomate desprendido y separado se presenta un pezoncito redondo, que, des- arrollándose sucesivamente, se trasforma, al cabo de algún tiempo, en un nuevo hemisomate igual á aquel en que estaba pegado antes de su separación, y jo. está el individuo nuevo completo y perfecto. Viven en las aguas vivas y quietas de los estanques y de los panta- CLASE I. — ALGAS. 5 nos, siempre sumerjidosse hallan agrupados en el vértice de los ve- jetales acuáticos, y con frecuencia ocupan el centro de unas masas mucosas que provienen de la concentración del mucus que envuelve á cada uno de ellos, y parecen huevecillos de ranas. Tribu 1. — MiCROSTERiEAS. — Individuos libres. Rudduli^lda australis, Graj. Parásitas sobre las fucoideas del puerto de la; Ha- bana, Cba. Tribu 2. — Eqüieelleas. — Individuos en número determinado contenidos en una mucosidad común á todos ó encerrados en tubos. Gr T Dcsfiiiclici/. 'Siii- familia III. — CONFFRVACEAS, Endl. Synsporeas y Zoosper:\ieas, Dcne. Zoospermeas, J. Agh. — Vejetales ordina- riamente verdes, alguna vez que otra color aceitunado y muy rara vez rojos ó morados, en los cuales se observan dos clases de fructifica- ción, frecuentemente reunidas sobre el mismo individuo. Uno de estos modos de propagación proviene de la metamorfosis de los granos clorofílicos contenidos en las celdillas, que toman formas regulares y se mueven con mucha velocidad, han recibido varios nombres y son las Esporidias de J.xlgh., las GonidiasdeKutz., losEs- porozoideas de Derb. y los Zoospermos de Dcne. ; en efecto, á cierta época determinada de la vida de estos vejetales, la sustancia verde ó clorofilar contenida en los endocromos de los filamentos, en las celdillas ó en los tubos que los constituyen, sufre una modificación orgánica profunda, á favor de la cual se trasforman en cuerpecillos movibles globosos ú ovoideos y provistos de un apéndice con figura de pico ; principian por moverse en el interior de la celdilla y de los tubos dando con el pico en el mismo punto, de suerte que á un mo- mento dado, escitado sin duda por esos golpecitos continuamente repetidos , se abre para darles salida ; entonces vueltos libres se ajitan y se entregan á movimientos muy rápidos dirijidos siempre hacia la luz, que parecen instintivos y como voluntarios, duran co- mo un cuarto de hora y cesan desde el momento que se liaa pegado de los cuerpos que están á su alcance ; no tardan en germinar y en desarrollarse en filamentos semejantes á la planta madre. El otro modo de propagación es esterior y proviene de la metamorfosis de una celdilla ó de una ramita trasformada, y contiene en un peris- poro hy aliño muchísimos granitos de sustancia verde, los cuales se condensan en un esporo simple ó cuaterno. Los esporos simples es- tán contenidos en las celdillas de las ulvas, en los endocromos de las conferveas y de las zynemeas; su tamaño es generalmente mayor que el de los zoosporos', y provistos con frecuencia de un episporo simple ó doble. En la sazón de la madurez se quedan simples ó se separan en otros cuatro, cuyo cada uno es tal cual las divisiones de un tetraspermo ó de un esporo cuaternario ; puede germinar y por consiguiente propagar la planta madre. Su forma es redonda ú ovoidea, y como los zoospermos se van adelgazando en pico, y se vuelven entonces apeonzados ; tal pico está adornado de cerdas en número variado, las cuales constituyen su órgano locomotor; se mueven ordinariamente con. el pico dirigido por delante y giran en el líquido á favor de un movimiento de trepidación; tales esporos 6 DIVISIÓN PRIMERA. AGAMOS. tienen un puntito rojo que les hace tan semejantes al infusorio lla- mado o)i i ero gle^ia Monadina, que no se puede diferenciarles de él. En la tribu de las Zinemeas se lia observado un acercamiento, una especie de copulación, es decir, que dos filamentos que antes del acto de la fecundación no llevan ningún indicio del papel que van á desempeñar, se acercan según su diámetro lonjitudinijl y al tocarse emiten de cada endocromo un tubito de junción por el cual pasan del uno al otro que parece tener el papel de hembra, todos los gra- nitos que contiene. Tales vejetales son formados de frondes membranosas mas ó me- nos grandes, compuestas de celdillas justapuestas en el mismo plan ó en tubos continuos ó tabicados, simples ó ramosos, á veces dis- puestos en derredor de un eje filamentoso de donde echan radios ó brazos hacia la periferie de una fronde compuesta, cilindrácea, tu- bulosa ó globosa, etc. Se crian con mayor frecuencia en las aguas dulces, mas rara vez en las del mar, y algunas veces en ambas á la par. Análisis cUcotómica de las varias trihis. 1. Celdillas aisladas ó reunidas , ó filamentos simples ó ramosos, 2. — Frondes muy variados tanto por su forma y finura como por su consistencia y disposición, 10. 2. Siempre celdillas, 3. — Filamentos siempre, 6. 3. Juntas por el cabo adelgazado ó igual las unas con las otras, contenidas en una redecilla polígana, raras veces ligadas entre sí por medio de un tejido membranoso, y conteniendo gonidias diver- samente conformadas. T. I, Hydrodicteas, G. T. Hydrodictlion, Roth. — Siempre globosas ó elípticas, nunca pegadas entre sí por el estremo y libres las unas de las otras, 4. 4. Mas ó menos distintas ó ligadas por medio de una ganga ó sus- tancia mucilajinosa. T. II. Palmelleas, Dcne., 5. — Agrupadas por serie filiformesimple ó ramosa y contenida dentro de una masa mucilajinosa diversamente conformada. T.III. Nostocineas, Harr., G. T. Nostoc, Yanch. Chlorococcum murorum, Grev., sobre la tierra húmeda en la Habana. 5. Ganga ó sustancia mucilajinosa nula ó poco aparente. T. IV. Protococcideas, Menegh. Clilorococciim 3Í07itagnei, Cba. — Ganga bien manifiesta. T. IV. Coccochloesas, Endl. G. T., coccochloris, Spreng. 6. Tubulosos simples ó raras veces con alguna ramificación, dota- dos de movimiento ó sin ninguno, 7. — Ramosos ó sencillos sin nin- gún movimiento propio, 10. 7. Con movimiento propio, tubulosos y cilindricos y estendidos en membranas ó en laminas y conteniendo endocromos disciformes que los hacen parecer como provistos de tabique. T. VI. Oscillato- eineas, Bory. Oscillatoria cMtono2Üastes , Lyngl. Cba. O. calida, Agh. en las aguas termales americanas. — Sin movimiento alguno propio, 8. 8. Siempre tubulosos y continuos, simples ó mellizos, 9. — Nunca CLASE I. — ALGAS. 1 tultulosos pero siempre articulados y sencillos, quedándose aislados ó acercándose los unos álos otros en la sazón de la reproducción, y echando artejos ó tubos de unión por donde las gonidias de un fila- mento pasan al otro ; esporos simples ó cuadriyugados. T. VI. Zygne- MEAS, Duby., G. T. Zynema, en las aguas quietas de Europa y de América, 9. Llenos de endocromos confluyentes ó no distintos. T. YIÍI. Lep- tothriceas, Kg. , G. T. LejHothrix. — Flagelliformes con endo- cromos distintos naciendo solitarios ó mellizos de un glóbulo tras- parente y echando radios ó brazos hacia todos los puntos de un segmento de esfera; ganga mucilajinosa. T. IX. Riyulaeieas. Harr., G. T. Riziilaria. 10. Simples ó ramosos y nunca gelatinosos, articulados; gonidias yerdes, color de aceituna ó brunas ; esporos simples nacidos de la concentración de las gonidias, de un solo endocromo, ó de la mezcla de los de dos endocromos vecinos. T. X. Confeeveas, J. Agh. Con- ferv afascicidaris , k^h.. puerto de la Habana, etc. — Siempre ramosos y jelatinosos, cilindricos y articulados, terminados por una celda mayor hialina y con figura de cerda; gonidias dispuestas por zonas transversales ; reproducción por zoosporos, por yemas cua,ternas ó por esporos estemos. T. XI. Drapaknaldieas , C. Montg. G. T. Draparnaldia , Bory. 11. Frondes mono ó polisifonieas, 12. — Frondes apenas sifo- nieas , cilindricas tubulosas, continuas, torulosas, las cuales se vuelven todas como un receptáculo de esporos. T. XII. Lemanteas, Dne. G. T. Lemania, Bry. 12. Monosifornieas, 13. — Polisifonieas y formadas de un tejido frecuentemente anastomosado y mas ó míenos denso, compuesto de tubos ramosos, continuos ó articulados, desnudos ó incrustados de sustancias calizas. T.XIII. Haliimedeas, Dne. — Halirneda incras- sata. Lamx. en el mar de las Antillas. 13. Formadas de fibras mas ó menos ramosas y nunca membra- nosas, 14. — Xunca formadas de fibras, pero de una ó de algunas capas de celdillas justapuestas, llanas ó tuberculosas, membranosas verdes ó purpurinas; esporos con mayor frecuencia cuarternarios. T. XIII. Ulváceas, Agh. — Esporichas contenidas en vesiculitas. S. T. Sifoxeas, G. T. Bryo])sis ramulosa, Montg, en el puerto de la Habana. — Esporidias por la superficie de la fronde. S. T. ülveas, G. T. IJlza lactuca y latissima , Agh. U. ])almata , Agh., C.T.V. 469, etc. 14. Continuas y llenas de un tejido esponjoso formado de fibras dispuestas á manera de redecillas. T. XIV. Cauleepeas, Grev. G. T. C aulerpa fastigiata, Montg. Cba. C. ericifolia, Agh. Mar de las Antillas. — Articuladas y encrustadas ; ramos dispuestos á manera de radios ó por haces en el vértice de la fronde, separados ó solda- dos lateralmente. T. XV. AcETABULARiEAS, Zuuard. Acefabularia cremilata, Acetaliilum cao'ihceíim , Lamx., en las iVntillas. H. Mo- nile, Lamx. Coralina monile, Ellis. en todas las Antillas, etc. Sul>- familia IV. — FLORIDEAS , Lamx. CHOBISTOPO' REAS, Dne. CERAMIACEAS, Lindl. — Estos vejetales están 8 DIVISIÓN PEIMERA. AGAMOS. caracterizados por su color que presenta todos los matices, desde el rosado mas pálido hasta el bruno ó el morado y por sus dos clases de órganos reproductores que nunca jamas se hallan juntos sobre el mismo individuo; los unos están por la superficie de las fron- das y consisten en espondias numerosas contenidas en una es- pecie de pericarpio jelatinoso ó membranoso. Se ha dado el nombre de esporidias á los esporos de las florideas, los cuales salen de la capa medular ó central de la fronda, son redondos ó planos, angu- losos ó con mayor frecuencia piriformes, formándose muy á menudo en los artejos de los filamentos que se abren á manera de gavilla en el conceptáculo, cuyas formas muy variadas corresponden á las tri- bus. En tales conceptáculos hay que observar dos cosas particula- res, la placenta y el pericarpio ó esporanjio. La placenta es axil, nula ó aparente, convexa ó emisférica, y en ese último caso celu- losa ó fibrosa; otras veces es parietal : en esta circunstancia los filamentos esporígenos están dispuestos en hacecillos que salen de to- dos los puntos de su cavidad y converjen hacia el centro. El espo- rangio parece obliterado en las florideas cuyo fruto conceptacular está escondido en la fronde, pero las mas veces sobresalen esterior- mente. El conceptáculo está cerrado ó provisto por su vértice de un poro mas ó menos visible, alguna que otravez con una boquita ó un pico : en las cerámicas los esporos son oblongos y contenidos en una membrana hialina y esférica; tal aparato es axilar ó terminal, des- nudo ó involucrado, es decir acompañado por su base de algunas ramitas abortadas ; se llama flavella ó flavellidia en las cryptone- meas , por causa del lugar diferente que ocupa. En las Peleserieas y las Plocarieas el conceptáculo se llama coccidia, es esférico ó he- misférico, conteniendo en un esporanjio celuloso, que en lugar de abrirse se revienta, esporos oblongos, aglomerados y pegados en una placenta central. Algunas veces el último endocromo solo se vuelve esporo, ó bien los endocromos siguientes participan de igual metamorfosis. Cuando los esporos están dispuestos por series de á 4, se diferencian de los tetrasporos por la presencia del endofragma que les separa;, sésiles ó pedicelados están revestidos de un episporo simple ó doble que se llama perisporo. Los otros órganos reproduc- tores están con mayor frecuencia, pero no siempre, anidados en la fronde; formados de un esporo, al principio indiviso, encerrado en un perisporo, celuloso, pero que se va separando en cuatro á la sa- zón de la madurez. Tales esporos se llaman entonces tetrasporos y nacen casi siempre en la capa cortical de las frondes, ordinaria- mente globulosos, raras veces oblongos ó elipsoideos; los cuatro es- poritos en que se parten están, al desprenderse, metidos en una celdilla matriz gelatinosa y trasparente llamada perisporo y mas tarde salen de ella, sea que se reviente ó se halle absorvida. El lugar de donde salen los tetrasporos es tan variado como su forma y el modo de que están reunidos entre sí; en efecto, se les halla aislados á lo largo de las ramitas ó agrupados, en número mayor ó menor, en un involucro llamado gloecocarpo , otras veces resultan de la meta- morfosis de' uno ó de algunos endocromos, comunicando entonces al ramo primitivamente cilindrico en que han nacido una forma lan- CLASE I. — ALGAS. 9 ceolada, j en este caso toman el nombre de Estichidia. En el género sirospora ocupan el vértice de las ramitas en donde están dispuestos por series de á 3 ó de á 4, á manera de las perlas de un collar. Se de- sarrollan además en las celdillas de la capa subepidérmica de los gé- neros cuya fronde es continua, seles halla entonces esparcidos irre- gularmente ó agrupados en un espacio circunscrito de ella, ó por fin situados sobre apéndices foliáceos particulares llamados esporofilos; algunas veces están anidados entre los filamentos tabicados que ir- radian de un punto de la periferie de la fronde y constituyen así es- pecies de verrugas hemisféricas llamadas Nemathecias. Llegada la sazón de la madurez, el tetrasporo se divide en 4 esporos de tres maneras diferentes; se eífectua esa separación triangularmente, cada parte parece entonces un tetraedro con una cara convexa, ó crucialmente ó por fin transversalmente, de manera que las dos di- visiones de en medio son disciformes, mientras que las dos estremas son hemisféricas, pero pronto después de la salida del tetrasporo fuera de la celdilla perispórica, cada división de él se vuelve per- fectamente esférica ; eso se observa en las formas oblongas y elíp- ticas. Las frondes se presentan bajo dos formas diferentes principa- les : en el primer caso consisten en filamentos tabicados ó solamente articulados, los cuales no son sino la celdilla madre que se va aña- diendo á sí misma según la longitud ; otras veces la fronde es conti- nua, corticosa, pegada á los cuerpos inmediatos por medio de garras dispuestas á manera de escudo ó filiformes. Todos los vejetales de esa subfamilia viven en las aguas del mar. Análisis dicotómica de las varias tribus. 1. Frondas mas ó menos filamentosas, 2; — no filamentosas pro- piamente dichas, pero mas ó menos membranosas, celulosas, coriá- ceas, 8. — 2. Fronda monosifoniea, articulada, raras veces celulosa ; con- ceptáculos desnudos ó involucrados; tetrasporos ordinariamente sa- lientes por la superficie. T. L Ceeamieas, J. Agh. G. T. Cera- mium Jil amento siim, claxicidatum, fiibruní, etc. Agh., en las Anti- llas. — Frondas filamentosas lejítimas, 3. 3. Compuestas de filamentos anastomosados entre sí ó fieltrados por el centro y libres j)or la periferie. T. II. Haloplegmeas, Montg. G. T. Halo]olegrna .Isíonig . — Celuloso-filamentosas ; concep- táculos anidados y escondidos por adentro de la capa cortical, raras cepveces esertos; tetrasporos inclusos, T. III. Ceiptonemeas, J. Agh., 4. 4. De fronda gelatinosa, 5. Nunca gelatinosa, pero celulosa ó cornea, 6. 5. Cilindrica ó comprimida ; filamentos periféricos radiados, mo- niliformes, libres ó poco adherentes entre sí; conceptáculos anida- dos entre los filamentos de. la periferie. T. IV. Gleocladeas, Harv. — Membranáceas, llanas ó cilindricas ; conceptáculos y te- 10 DIVISIÓN PRIMERA. AGAMOS. trasporos anidados los unos y los otros adentro de la capa cortical. T. V. GaSTEROC ARPEAS. 6. Carnosas j membranosas, 7. — Corneas "y membranosas; con- ceptáculos nacidos dentro de la capa cortical cuyos filamentos forman en su rededor una especie de pericarpio saliente ó incluso, pero que siempre se abre por medio de un poro; tetrasporos triangularmente divididos. T. VI. Coccocarpeas, J. Agh. G. T. Gigartina ascicu- laris, Lmx. En las Antillas. 7. Filamentos radiados mas ó menos íntimamente soldados entre sí; conceptáculos anidados en la capa cortical, á veces abriéndose por un poro, otras veces escapándose los tetrasporos al llegar la madurez por una abertura formada por|^l apartarse las fibras ó fi- lamentos corticales. T, VII. Nemastomeas, J. Agh. — Conceptá- culos inmergidos en la sustancia de la fronde ó anidados dentro de especies de verrugas; tetrasporos naciendo algunas veces entre los filamentos radiantes de las verrugas, otras veces en los endocromos de los filamentos. T. VIII. Esponjiocarpeas. Grev. C'hondrus s^herococcícs , Ag. C7i. multíjjartitiis, Lamx. En las Antillas. 8. Celulosas continuas ó articuladas, 9. íso celulosas, pero reti- culadas y de forma variada, 15. 9. Continuas, 10. — Areoladas ó articuladas y color rojo de san- gre; conceptáculos esteriores ; ó^onceptáculos y pericarpios como en las lomentarieas ; tetrasporos inclusos dispuestos por series so- bre ramitas ó segmentos de la fronde transformadas en estricbidias. T. IX. RODOAiELEAS, J. Agll. 10. Compuestas de celdillas redondas ó poliédricas, 11. — Nunca formadas de celdillas redondas ni poliédricas tampoco, conceptácu- los siempre esteriores, 14. 11. Placenta central , 12. — Placenta no central ordinaria- mente, 13. 12. Esporos nacidos en los endocromos de filamentos endereza- dos. T. X. Plocarieas, Montg. — Pericarpio celuloso contenido en los conceptáculos; esporas piriformes enderezadas y pegadas por el estremo mas delgado en la placenta. T. XI. Lomentarieas. 13. Conceptáculos anidados en verrugas ; tetrasporos sorifor- mes. T. XIÍ. Piizofillineas, Montg. 14. Siempre de forma variada, placenta parietal; conceptáculos inmergidos ó mamilares; filamentos esporíjenos convergentes bácia el centro de los conceptáculos, como en los fucus. T. XIII. Che- TAI4GIEAS, Kg. — Simples ó compuestas, 15. 15. Siempre compuestas, planas, reticuladas y provistas de una nervadura ramificada. T. XIV. Turétieas, Montg. — Simples ae- reoladas ó sin aerólas ó alveolitas, 16. 16. Siempre en redecilla; tetrasporos desarrollados por dentro de las fibras formando la redecilla ó en las celdillas de la fronde. T. XV. Anomalofileas, Dne. — Xunca en redecillas, pero mas ó menos articuladas, 17. 17. Frondas comprimidas, pinadas, con eje articulado; concep- táculos esféricos, axilares y pedicelados ; los de las esporas unilo- culares, mientras los de los tetrasporos son poliloculares. T. XVI. CLASE I. — ALGAS. 11 EcTENODOKTEAS, Montg. — Frondas cilindráceas comprimidas ó planas, continuas ó articuladas, cubiertas de una capa calcárea ; conceptáculos esteriores ó inmerjidos, abriéndose por un poro; es- poros piriformes al madurar, partiéndose en 4 transversalmente. T. XVII. Cora LINEAS, Lmx. Coralina, , Snh- familia V. — FICOIDEAS , Sprg. FUCACEAS, Lindl. FICE AS, Endl. ASPLOSPOREAS, Dne. — Las algas que for- man esa gran sub-familia viven casi todas en los m^res, casi todas son viváceas y entre ellas se hallan las especies giganteas. De fron- das coriáceas, con ó sin nervaduras, membranosas ó filamentosas, continuas ó articuladas, y en ese último caso mono ó polisifonieas , de color verde aceitunado ó bruno y volviéndose negras al aire; planas, filiformes y cilindráceas; compuestas de celdillas cuya forma es muy variada; raras vecaB están reducidas á una celda única, pero en el mas alto grado de su desarrollo toman formas tales, que en ellas se ven tallos, hojas pecioladas, vesículas aéreas y receptáculos distintos. La fructificación consiste : 1"^ en esporas verdes ó pardus- cas, formadas de un núcleo simple ó múltiple, envueltas en un pe- risporo suministrado por la celdilla matriz y provisto de un epis- poro ó membrana propia. Cuando los esporos están desnudos ó esteriores, el alga se llama gimnosperma y angiosperma al contra- rio, cuando están contenidos en un conceptáculo con una placenta y un periscarpio ó forangio: tal conceptáculo se forma en la capa cor- tical de la fronde y no está separado de la médula sino por una ó por algunas capas de celdillas ; sobresale muy poco de la superficie del vejetal y tiene en el vértice un poro por donde han de salir, á la sazón de la madurez, las esporas nacidas de sus paredes interio- res y que converjen hacia el centro de la celda. Estos conceptáculos están tan pronto esparcidos por la superficie de la fronde como reu- nidos por el vértice , formando por su reunión un órgano llamado receptáculo, casi confundido con la. fronde ó enteramente distinto de ella. Los esporos son unos cuerpecillos esféricos ovoideos ó piri- formes, los cuales se forman siempre en una celdilla periférica ó su- perficial, sea que pertenezca á la capa cortical de la fronde ó á la pared del conceptáculo; la celdilla crece con su núcleo y viene á ser su envoltura ó perisporo. Las esporas son continuas ó se dividen antes ó después de su salida del conceptáculo en 2, 4 ú 8, cuyas par- tes ó. divisiones constituyen otras tantas esporas capaces de germi- nar. Por la madurez, las esporas inclusas se desprenden de la pared del conceptáculo, caen en su cavidad y salen por el poro situado en su vértice con un mucílago abundante que facilita su salida; no tie- nen movimiento , aunque con frecuencia están provistas de cerdas. Algunos zoosporos han sido observados en vejetales de esa sub-fa- milia, y el señor Thuret los ha visto reproducir las laminarias. El segundo orden de órganos reproductores se compone de los acros- permos ó anteridias y de las espermatodias. Los primeros consisten en filamentos ramosos, cuvos últimos endocromos, ordinariamente mas gruesos y elípticos, están llenos de un núcleo, gonimico ó de granulos que se hallan contenidos, sea en el mismo conceptáculo con las esporas, sea en conceptáculos diferentes sobre el mismo in- 12 DIVISIÓN PRIMERA. AGAMOS. dividuo Ó sobre dos individuos distintos; desagregándose en ciertas épocas dan nacimiento á cuerpecillos dotados de una gran movili- dad. Se lia dado el nombre de parauses á unos filamentos confervoi- deos, ordinariamente simples, que acompañan algunas veces á las esporas esteriores, y que se hallan inclusos con las esporas, sea so- los sea con los acrospermas también, j naciendo como estos últimos de las paredes, y converjiendo hacia el centro del conceptáculo, en la boquita periforme del cual se les vé con frecuencia presentarse; en fin, las espermatodias consisten en filamentos sentados ó estipi- tados, simples, bi ó cuadrífidos por el vét'tice, lanceolados, ovoideos ó aguzados, etc., con numerosas gonidias verdes dispuestas por series lineares longitudinales y transversales que los forman entera- mente. Se llama endócromo á las celdillas que contienen, en las al- gas filamentosas y articuladas, la materia colorante de cada artejo ó segmento, ha recibido también los nombres de esporangios, goni- dias y de cromatidias. Análisis dicotómica de las varias trihos. 1. Fronda vesiculosa ó tubulosa y filamentosa, 2. — Fronda-ni vesiculosa ó tubulosa, ni filamentosa tampoco, 6. 2. Vesiculosa ó tubulosa ; tubos continuos, sim^^les ó ramosos ; esporas laterales, frecuentemente involucradas ó terminales ; re- producción por zoosporos. T. I. Vaucherieas, Dne. Bryopsis ])en- nata, Lmx., Antillas. — Tubulosa ó filamentosa, 3. 3. Tubulosa, 4. Filamentosa, 5. 4. Tubos continuos flojamente reunidos, con figura de fronde, es- poras laterales ó terminales. T. II. Espongodieas, Lamx. — Fronde principal monosifoniea continua ó articulada, desnuda ó incrustada de sustancia caliza, frecuentemente casi cornea ; ramitas articula- das, membranosas, verticiladas á lo largo del tallo ó reunidas por haces terminales. T. III. Actixocladeas, Dne. 5. Filamentos ramosos, articulados y confervoideos ; esporas la- terales cortamente pediceladas; espermatodieas. T. IV. Ectocar- PEAS, Agh. — Filamentos ramosos con tabiques celulosos, frecuen- temente terminados por una cerda ó una especie de pestaña, y reu- nidos en una fronde diversamente conformada por medio de una sustancia gelatinosa; esporas esteriores. T. IV. Chetoforeas, Dne. 6. Fronde gelatinosa, 7. — Fronde nunca gelatinosa, 8. — 7. Desnuda ó incrustada de sustancia caliza y polisifonea; esporas laterales ó terminales y agregadas. T. VI. Bratacospermeas, Dne. Liag ora pulx encienta, Agh. Galaxaiir a rugosa, Lmx. Dicotomafra- gilis, Lmx. D. cylindrica, etc. En la mar de las Antillas. — Polisifo- niada, eje filamentoso echando ramitos horizontales no adherentes y en cuya base se hallan esporas ó espermatodias. T. VIL Chorda- RIeas, J. Agh. 8. Con figura de aceituna, articulada, ramosa, polisifoniada, fructificación monoica, esporas solitarias j laterales. T. VIII. Es- FACILARIEAS, J. Agh. — Nunca jamás con figura de aceituna, pero CLASE II. — FUNGÁCEAS. 13 mas ó menos estensa, simple ó compuesta, continua ó de forma muj variada, 9. 9. Provistas mas ó menos de acrocistos, 10. — Siempre sin acro- cistos, 12. 10. Fronda de forma muy variada; acrocistos dispuestos á ma- nera de cadena en su interior ó distintos y pedicelados ; receptácu- los distintos simples ó ramosos, solitarios ó agrupados, axilares ó terminales, T. IX. Cystosikeas, Endl. Sargassíim xtügare, Agh. Fucus natans, Turn. S. Cymosicm, Agh. S. Bsperii^ Agh. S. lendi- geriis, Agh. S. Ucrdinatiis, ^gli. Fucus turlinatus, l^.Turhinariacle- nudata, Bory. S . plaücarinim , Montg. C. T. Y., 468. — Todas esas especies se hallan en el mar de las Antillas, y el mdgare constituye especialmente las uvas del trópico; no pasan del 40 grado en ambos hemisferios. — Fronda siempre continua, acrocistas nunca dispues tas á manera de cadena en el interior de ella, 11. 11 . ' Fronda estipitada coriácea, en cuyos segmentos se desarrollan, alguna vez que otra, las acrocistas; esporas anfígenas, enderezadas, agregadas en soros mas ó menos estendidos; zoosporcs. T. X. La- MiXAKiEAS, Bory. — Fronda celulo-filamentosa de color aceitunado, frecuentemente provista de areocistas innatas; conceptáculos es- parcidos ó agregados en el vértice de las ramas, pero nunca jamás reunidos en un receptáculo distinto de la fronda. T. XI, Fucea's, Mengh. Fucus x¡esiculosus, L. F. compressiis, Agh. F. pigmetis, Her. F. serratus, L. C. T. Y., 410. Se hallan en el mar de las Antillas. 12. Fronda continua, membranosa, plana, unas veces fíabellifor- me ; esporas esteriores esparcidas ó agregadas en soros, acompaña- das ó no de paraspermos. T. XII. Dictioteas, Lamx. Dictiota ci- liata, Lmx. D. 'polipodioides, Lmx. D. dentata, Lmx., etc. Todas se hallan en el mar délas Antillas. — Fronda continua membranosa, cartilajinosa, filiforme, comprimida ó plana, sólida ó hueca, con ramificaciones .distintas ó irregulares; receptáculos configura de cabeza, coronados por filamentos caducos. T. XIII. Esporocneas, Grev. CLASE II. —FÜNGÁCEAS. Familia 2. — HONGOÍS, AGARICACFAS, Ldly. — Yejetales siempre terrestres ó parásitos sobre los demás y hasta sobre los ani- males, cuyas formas y cuyos coloresvarian tanto como su consisten- cia y su tamaño : en efecto, son tan pronto carnudos, mucilajinosos y membranosos, como coriáceos, cartilajinosos y hasta casi leñosos. Al hablar detenidamente de las varias tribus que unos autores mi- ran, con razón sin duda, como otras tantas familias, estudiaremos sus numerosas formas : diremos solamente de paso que en los mas superiores se distingue un piececito, un sombrero mas ó menos grande, cuya cara inferior es cubierta por laminitas, tubitos ó poros, mientras que los mas inferiores consisten en unas masas glo- bosas ovoideas ú oblongas. Las fructificaciones consisten en semilli- tas desnudas ó no desnudas, ó esporitos visibles solamente con el 14 DIVISIÓN PRIMEBA. AG-AMOS. microscopio, que se presentan bajo la forma de un polvo muy sutil mas ó menos prieto, ya esparcido por la superficie de la planta, ya contenido en receptáculos capilares ó conceptáculos carnosos, duros ó leñosos. Análisis dicotómicOr de las stch-familias estallecidas en ese gricpo ó familia. 1. Esporas cubiertas de mucosidad ó Contenidas en celdillas pro- longadas, cilindricas ó claviformes. Hipoxileas. — Esporas nunca jamás envueltas en mucosidad, 2. 2. Agrupadas por á 4; 3. — Esporas y esporangios solitarios, 4. 3. Himenio encerrado en un peridio. Licoperdáceas, 4. Esporas no encerradas ó desnudas, 5. — Esporas siempre en- cerradas, 6. 5. Talludo apenas notable. Uredineas. — Talluelo vedijoso; es- poras frecuentemente por á 7. — Botritáceas. 6. Contenidas en sacos ú odres Helvelldceas, — Contenidas en es- porangios desnudos ó cubiertos por un velo vesicular. Mucoráceas. Suh-familia 1. — HIPOXILEAS. — Vejetales muy pequeños, casi siempre negros, ordinariamente parásitos, y en este caso salen del tejido celular de las plantas fanerógamas vivas, rompiendo su epidermis ; algunas especies nacen sobre la madera muerta y aun en la tierra. Tienen fructificaciones análogas á las de los liqúenes y que forman toda la planta; sus receptáculos son solitarios, agrega- dos y aun soldados entre sí por la base, de forma globulosa, de con- sistencia coriácea, cerrados al principio y se van abriendo después por un agujero ó por una hendidura, y contienen una especie de nú- cleo distinto, blando, delicuescente, el cual está formado de esporos cubiertos de mucosidad ó contenidos en celdillas prolongadas, cilin- dricas ó claviformes. Constituye ese grupo la familia de los hipóxi- los de Decandolle, y corresponde á los pirenomicetas de Fries ; su principal género es la sphaeria ó esferia que ha dado lugar á mu- chas divisiones y otros géneros. Ninguna de las especies, que son muchas, tiene aplicación alguna, sea á la economía doméstica, sea Sub- familia 2. — HONGOS LEJITIMOS, AGARICACEAS, Ldly. HIMENOMICETOS, Ees. — Los vejetales agrupados en esta división son tan pronto gelatinosos como carnosos y coriáceos, y nacen sobre los restos de materias vejetales ó animales; otros sa- len de la tierra y mas raras veces se encuentran en los vejetales vi- vos, cuya presencia en ellos indica que están enfermos. Empiezan á crecer debajo de la tierra, ó en su superficie, en el estado de fila- mentos entrecruzados, de los cuales nacen cuando las circunstan- cias se vuelven favorables. Tales vejetales tienen esporas ó espo- rangios esteriores, situados en una membrana mas ó menos distinta del receptáculo general, y el conjunto de estos dos órganos forma ya una masa jelatinosa, como se vé en las trémulas y otros géneros, ya un disco ó una copa, ya un cuerpo cilindrico y ramificado, tales V. CLASE II. FUNGÁCEAS. 15 son las clavarias; lo mas generalmente, sin embargo, aparecen con figura de un cuerpo abultado ó estendido en su parte superior, algu- nas veces sinuoso, lleno de cavidades y de bultos, como en las mor- chellas, pero ordinariamente con forma de sombrero, como se vé en los agáricos, bolestos y otros géneros. El himenio se va estendiendo á la superficie inferior del sombrerillo bajo forma de láminas mas ó menos desiguales dirijidas del centro á la circunferencia y lla- madas hojillas, tales se las observa en los agáricos; otras veces se halla en forma de filamentos verticales semejantes á las cerdas de un cepillo; los hidnos están en ese caso; en fin, consiste en un tejido espoDJoso j poroso, como en los boletos. Las esporas ó esporongios están colocados en gran número en los pliegues de las hojillas, en los puntos ó en los poros de esta membrana. Algunas veces el som- brerillo, al salir del receptáculo rompe una membrana ó envoltura que se llama volva j cujas señales se encuentran en la base ; otras veces el crecimiento se verifica sin ruptura en la base, pero los bor- des del sombrero están unidos al estremo del pedúnculo por una membrana que se rompe y cuyas señales se ven en la parte superior del piececito en forma de collar, y á veces en el sombrerillo mismo. Contiene ese grupo mucho mayor número de géneros y de espe- cies que los demás juntos, jen él se hallan la mayor parte de las especies comestibles y también muchas venenosas, algunas utiliza- das por las artes, y en fin, el mayor número cuya utilidad y prove- cho nos son todavía desconocidos. Se hallan en él los géneros holetus, agariciis, tremella, liidniím, clavaria, etc. Se come en las Antillas el agaricus niveiis , L. A, edulis, BulL, etc; C. T. V., 171. Suh-familia 3. — LICOPBRDACEAS.— Se presentan esos vejetales generalmente en figura de masa redonda ó de bola mas ó menos gruesa, ora en la superficie del suelo, ora en su interior, ora parásitas sobre otros vejetales. Su receptáculo fibroso contiene las e&poras en su interior, mas ó menos redondo y compueisto de dos capas concéntricas mas ó menos distintas, la primera de las cuales, mas coriácea, está cubierta de asperezas que se forman á medida que va avanzando la edad del vejetal ; la segunda, mas filamentosa ó carnosa, da nacimiento á los esporos, casi siempre encerrados en celdillas. Tales hongos principian por ser fuertes, coriáceos y cerra- dos por todas partes ; después se abren mas ó menos por el vértice y muchas veces los esporos se diseminan bajo la forma de polvo sutil con los restos del tejido interior filamentoso. Se halla en esa divi- sión la trufa ó criadilla de tierra, una de cuyas especies, el tuder cinereum, C. T. V., 172, se encuentra en las Antillas ; el pedo de lobo coronado ólycoperdon coo'onatum , 52. En fin, éntrelas parásitas citaremos la spermoedia maydis, que constituye el maiz atizonado, C. T. V. 183, y el sclerotium clavum, tizón ó centeno cornudo. Sul-familia 4. — UREDINFAS. — Los vejetales comprendi- dos en este orden son muy pequeños, todos parásitos, y salen de las demás hojas vivas, de los demás vejetales, rompiendo su epidermis. Se consideran como esporangios que contienen muchos esporos y que no están rodeados de ninguna envoltura común. Se presentan con la mayor frecuencia bajo la forma de manchas amarillas, pardas 16 DIVISIÓN PRIMERA. AGAMOS. Ó negruzcas en la superficie de los órganos foliáceos de los vejetales. Tales parásitas son muy temibles por el cultivo principalmente de las cereales. En efecto, á ellos pertenece el tizón del trigo, uredo cario y U.vera, el uredo maydis ó maiz con bubas: no son peligrosos para los animales ni para el hombre, que comen sin peligro los ce- reales atacados por ellos. Suh-famiUa 5. — MUCEDINEAS.—'^dle^ son las vejetacio- nes, llamadas vulgarmente enmoliecimiento, que se ven diariamente desarrollarse sobre todas las materias orgánicas en descomposición 6 que principian á descomponerse con ciertas condiciones de tem- peratura, de oscuridad, etc. Se presentan ordinariamente conforma de filamentos delgaditos, cilindricos ó abultados en forma de cabe- za, simples ó ramosos, divididos 0 no por tabiques, por lo regular de color blanco ; producen esporos, ya esteriores y aislados, ya in teriores y aglomerados en ciertas celdillas. En esta división se en- cuentra el oidio, que fué tan fatal á los viñedos, que era quizás solo el síntoma aparente de una enfermedad contajiosa y desconocida de esos vejetales, así como el de las papas. El pan enmohecido, por ejemplo, no se debe comer, porque no solo es malsano, sino que puede determinar accidentes de gravedad. Así será para todas las sustancias alimenticias que presenten enmoliecimiento. Muchísimas veces se pregunta á los médicos y á los boticarios y también á las personas aficionadas á la botánica, qué hongos ó setas son las que se pueden comer, porque se supone general y vulgar- mente que hay reglas fijas para poderlos escojer; pero eso no es exacto. Los botánicos han reconocido solamente ciertas categorías de órganos como nocivos ; pero no conocen carácter ninguno que sea común, especial y único á las especies comestibles, lo -que es causa de las desgracias que cada año suceden con esos vejetales. Se suele tener por peligrosos, como lo son en verdad : 1" los hongos ó setas que cambian pronto de color cuando se les corta, y hay, por ejemplo, algunos cuya cortadura se vuelve azul de una manera muy notable; 2** los que son lechosos ó que contienen un suco que parece leche j por lo regular es mas ó menos acre y hasta cáustico; 3° en fin, los que al envejecer se convierten en una especie de agua negra. No es posible establecer una línea divisoria terminante en- tre los inocentes ó buenos para comer y los que son venenosos, puesto que es digno de observación que hasta los que se comen im- punemente en ciertas circunstancias, se hacen venenosos en otras. ■ Falta aclarar no solo cuales hongos son verdaderamente ponzoño- sos, sino los que suelen ser inocentes y dejan de serlo cuando no han llegado ó han pasado de su ¿azon. Puede pues creerse que de- masiado maduros, y sobre todo secos, se hacen mas dañosos que an- tes de alcanzar toda su madurez. Los principales hongos venenosos pueden reducirse á los del género amanita y del género agárico : distínguense ios primeros en que salen de una especie de bolsa ó bulbo, en que su sombrerillo está guarnecido de boj illas ó laminillas radiantes por debajo y sostenido por un pedúnculo mas ó menos hinchado en la base; mientras los del género agárico no tienen por la base del pedúnculo bolsa alguna y las hojillas del sombrerillo son CLASE II. — FUNGÁCEAS. 17 ordinariamente sencillas y mas cortas. No solamente reina cierta vaguedad en la acción de los hongos sobre la economía, sino que hasta los mismos venenosos ofrecen en esta parte tal variedad, que es imposible comprender los síntomas producidos por ellos en un solo cuadro ; en efecto, hay los que obran realmente como nervioso- inflamatorios , puesto que inflaman los órganos y causan estupor al mismo tiempo : otros solo irritan el sistema dij estivo : otros causan únicamente estupor, aplanamiento ; otros en fin , según afirma Or- fila, obran á la manera de los sépticos. Estando en las Antillas poco vulgarizado el uso de los hongos como alimento, y siendo además esos vejetales mucho mas escasos en los países cálidos que en los templados, no describiremos aquí los síntomas particulares á esas intoxicaciones, diremos solamente de paso, que los dolores de estó- mago, cólicos y sudores frios, indicios de la intoxicación, no se pre- sentan sino algunas horas despuál de comidos los hongos. La acción mortífera de los que son venenosos parece ser debida á ciertos prin- cipios que entran en su composición, puesto que privándolos, por medio de cocimientos, de dichos principios pueden ser comidos im- punemente. Los principios que se consideran mas activos son uno acre, muy fugaz y poco conocido, otro muy deletéreo que Lepeletier ha encontrado unido á sales de potasa y sosa, muy soluble en el agua : se llaman fungina y amanita. Según los esperimentos de Or- fila, el vinagre dado mientras los hongos están todavía en el estó- mago ó los intestinos, activa su acción porque hace mas solubles sus principios venenosos, y por consiguiente es muy perjudicial : cuando ya han sido espulsados, entonces su empleo es muy favora- ble ; de la sal común hay que decir otro tanto. El éter sulfúrico, el mas empleado en estos últimos tiempos contra esa intoxicación, es el mas conducente y eficaz. La cura debe empezarse siempre por ha- cer arrojar la sustancia tosiga por ios vómitos y cámaras, como lo tenemos señalado al hablar de los venenos en la paj'te correspon- diente del Compendio, porque si el envenenado no arroja los hongos comidos, se muere siempre : si se consigue que los arroje hay gran- de esperanza de salvarle. Muchas especies son venenosas cuando se comen crudas y no lo son. cuando se preparan con sal ó se cuecen. Los rusos comen cualquiera clase de hongos ó setas, pero tienen la precaución de cocinarlos con agua y mucha sal de comer : después de sancochados así, botan el caldo y hasta los esprimen en una tela y entonces los guisan : de esa manera no sucede ninguna desgracia. Si se quisiese ensayar una' especie que se ha visto usar otra vez, es preciso asegurarse primero de la identidad perfecta de la especie y de su pais, con la que se juzga comestible, examen difícil, que no debe hacerse sino con individuos en buen estado y de diferentes edades ó por medio de láminas y descriciones detenidas : después es necesario aderezar un plato á la manera del pais en que se usa. Si es un ensayo enteramente nuevo el que se quiere hacer, conviene no comer la primera vez mas que uno ó dos bocados y otro dia ma- yor cantidad, si el primer ensayo ha salido bien : en el caso de creerse envenenado escitar cuanto antes el vómito y las deposicio- nes y después tomar éter sulfúrico. En las Antillas y en los demás TOMO II 2 18 DIVISIÓN PRIMERA. AGAMOS. países cálidos aiinque húmedos, hay muy pocas especies de hongos en comparación de los que abundan en los paises frios y templados. Por lo general, las setas constituyen un alimento fuerte , reparador y bien nutritivo, pero indijesto, de que deben abstenerse los estó- magos débiles. CLASE III. — LIQUÉNEAS. Familia 3. — LIQUENACEAS. —Plantas terrestres que du- ran mucho tiempo, rara vez verdes, pero á veces adornadas de los mas primorosos colores ; mas todas se vuelven verdes cuando están húmedas ó mojadas y su tejido seco, quebradizo ó coriáceo se hace blando y flexible. Se crian, ora en^l suelo, ora en las cortezas de los demás vejetales, ya vivos ó ya muertos, pero nunca en putre- facción, y también sobre los peñascos mas desnudos y estériles. Se presentan en forma de espansiones membranosas, ramosas ó fila- mentosas, tan pronto foliáceas como dendroideas, cuya figura, ta- maño y consistencia varian muchísimo. En efecto, muchas veces no son sino una especie de polvo fino sin forma determinada, otras ve- ces costras mas ó menos regulares y un poco mas consistentes, etc. Se compone el tejido de esos vejetales de tres clases de celdillas; las unas cortitas, cuyas paredes espesas están íntimamente pegadas entre sí; las otras, alargadas en filamentos flojamente feltrados for- man la capa medular de los liqúenes mas perfectos, cuya corteza corresponde á las primeras, mientras las terceras globosas, esparci- das y sin adhesión entre sí, se llaman gonidias y pueden desarro- llarse y reproducir el vejetal de donde han salido, constituyen su parte mediana ó gonidal. Tales gonídeas están á veces esparcidas por grupitos en medio del tejido medular. Unos saquitos mas ó me- nos larguitos, llamados teques, contienen los esporos en número de dos, cuatro, seis y ocho ordinariamente, agrupados en la sustancia del talluelo que constituye el receptáculo; otras veces están en una sustancia propia é intermedia llamada hipotecio. Tal receptáculo forma en derredor de los grupos un ribete saliente á espensas, sea del talluelo, sea de la sustancia propia ó hipotecio, sea de ambas á la par, y constituye así una marjencita ó una cavidad cerrada, con- teniendo las teques, la cual toma el nombre de peretechio. Con los teques se entremezclan unos filamentos estériles llamados parafises/ los cuales son mas largos y cuyo vértice está ligado por una sustan- cia viscosa que segregan, forman una masa ó núcleo, la cual con su receptáculo se llama apeteció. Se da el nombre de espermatias á otros órganos mucho mas pequeños y con frecuencia zambullidos en la sustancia del talluelo, cu^^a superficie está cubierta de filamentos celulares ordinariamente tabicados, cuyas estremidades, ora ovoi- deas, ora filiformes, acaban por desarticularse y, libres en la cavi- dad que Íes ha producido, salen por fin á favor de un poro situado por el Yér tice y su presencia casi constante en las cercanías de los apotecios hace suponer que sirven para la fecundación. El esporo "•^a maduro y sólido fuera de las teques germina á manera de los CLASE IV. — MUSCÍNEAS. 1^ hongos, es decir, que se alarga por uno ó por algunos puntos en fi- lamentos ramosos, que multiplicándose, no tardan en entrelazarse sea entre sí, sea con los dos esporos vecinos y forman una especie de redecilla de donde salen, en los lugares donde está el fieltro mas espeso, pequeñas masas celulosas que van dilatándose poco á poco, forman el talludo v ja el liquen ha nacido. Análisis dicotómica de las t arias tribus, 1. Receptáculo suministrado por el talluelo mismo, 2. — Recep- táculo formado al contrario por una sustancia propia, 3. 2. Apotesias abiertas con el núcleo deshecho en esporos desnu- dos. T. I. CoNiOTALAMOS. Piclv eraría chlorida, Ach. Se halla en las grietas de la corteza de los árboles y de las piedras. — Apotesias pri- mitivamente cerradas y por fin abiertas, espulsadores de un núcleo jelatinoso, compuesto de esporas desnudas. T. II. Idiotálamos. Umbilicaria xellea^ Ach, Sobre las rocas. 3. Provistos de peritecio cerrado, apotesias cerradas ó abiertas, mediante un escípulo taloideo irregularmente hendible ; núcleo in- cluso, ascigero ydeliquescente ó rajable. T. III. Gasterotálamos. Va7'iolaría amara, Ach. V. discoidea, Pers. Liclieii discoideus, L., — provistos de un peritecio abierto; apotesias abiertas; núcleo dis- ciforme, persistente y ascigero. T. IV. Himenotálamos. Cladonia sanguínea, Mart. C.T.V.53. — Cenomice xermiciUaris, Ach. Cía. verr/iícularís, Hook. Lidien vermicularis , L. — Parmelia paríe- tina, Ach. Lidien parietinus, L. :'J23. — Evernia pumastri, Hook. Lidien pumastri, L. — Peludea aphthosa, Hook. Lidien aplitJiosus, L. — üsueaplicata, Ach. Lidien plicatm, L. : C. T. V., 415. SECCIÓN II CLASE IV. — MUSCÍNEAS. ' r Familia 4. — HEPÁTICAS. — Yerbecitas terrestres verdes j con estomates por la superficie, que se crian en los lugares umbro- sos y húmedos, alguna vez que otra parásitas, con forma de espan- siones membranosas ó foliáseas, algunas veces provistas de tallitos con hojuelitas empizarradas ó dísticas, monoicas ó dioicas, pero á veces enteramente desprovistas de hojitas no son sino una espan- sion herbácea llamada fronde. Tienen dos clases de órganos repro- ductores : las anteridias, que consisten en unos saquitos perfecta- mente cerrados al principio, pero que después, á cierta época, se abren por un punto de su superficie^ por donde sale la materia que contienen, la cual es formada de un montoncito de corpúsculos or- dinariamente ligados entre sí por un líquido mucilajinoso; y los ar- chegonios ó esporangios, especies de capsuhtas pediceladas con mu- chas ventallitas y sin tapa, llenas ele esporas pegadas en ellas por medio de filamentos elásticos en forma de espira ; otras veces hun- 20 DIVISIÓN PRIMERA. AGAMOS. didas en el tejido de la espansion y entonces se hallan desprovistas de ventallitas y las esporas que contienen están sin los filamentos elásticos mencionados. Análisis dicotfÁnica de las tribus de esa familia. 1. Esporos triangulares, piramidales ó semiredondos y sin elate- rio. RicciÁCEAS. — Esporos siempre provistos de un elaterio ó fila- mento espiral entremezclado con ellos, 2. 2. Esporangios pediculados, dehiscentes por dientes ó circunci- sos, rarísimas veces cuadrífidos. Plantitas membranosas con talluelo lobado, frecuentemente provisto de estomas; anteridios sumerjidos en el talluelo ó en receptáculos disciformes sentados y á veces abro- quelados ó pediculados. Marchanciaceas. Marcliantia andrógina, L. : C. T. Y. 339. — M. clienopoda-, L. 567. Esporangios ó cajitas pedi- celados, cuadrivalves, rarísimas veces univalves y sin opérculo. Jungermaniáceas. CLASE V. — FELICÍNEAS. Familia 5. — HELÉCHOS. — Plantas herbáceas ó leñosas que se crian ya en la tierra, ya en los peñascos ó en las paredes anti- guas y también á veces falsas parásitas, viven pegadas á la corteza de los árboles, rarísimas veces son trepadoras; de tallo ó rizoma ordinariamente progresivo, es decir, que mientras se alarga y crece por el estremo por donde salen las hojas, se va destru- yendo por el otro estremo que lleva las raices; otras veces pa- recen árboles y simulan los astiles de las palmeras y son mas ó me- nos altos; por último y rarísimas veces, consisten en un bejuquito mas ó menos largo y muy delgado, mas ó menos fuerte, con hojas simples ó compuestas y alternas. Las hojas ó frondas, á veces muy grandes y siempre muy elegantes, antes de su desarrollo completo están siempre arrolladas á manera de báculo de obispo y hacia adentro, no solamente el limbo general sobre el peciolo comun^ sino también todas sus divisiones ó lóbulos, llamadas pínulas sobre los peciolos parciales, de tal manera que cuando son tiernas, la cara inferior está siempre escondida; provistas de pelos escamosos ó membranosos abundantemente esparcidos por la superficie y ordi- nariamente mas ó menos aleonados ó brunos. Los órganos repro- ductores ó esporas son siempre contenidos en saquitos celulosos, esporanjios ó capsulitas, siempre situados por la cara inferior de las hojas, que entonces conservan su forma ó se vuelven muy dife- rentes de las no fructíferas, pierden en este caro la mayor parte ó todo el parenquima, quedándose solamente las nervaduras cubiertas de capsulitas. Tales esporanjios presentan generalmente en su pared celulosa una hilera de celdillas mucho mayores y mas espesas que las demás, dispuestas cabo á cabo y á manera de anillo que rodea mas ó menos la capsulitas, cuya posición varía bastante: á veces es incompleto y falta con frecuencia ; parece tener por papel determi- CLASE Y. FELICÍNEAS. 21 nar la ruptura de la capsulita y facilitar por sus movimientos higro- métricos la salida de los esporos. Las capsulitas no nacen esparci- das ni aisladas tampoco por la superficie de la cara inferior de las hojas, sino por grupos que se llaman soros, cuja forma variada su- ministra, así como el anillo, muy buenos caracteres diferenciales : su posición relativa varía también, de tal manera que están esparcidos con mayor ó menor regularidad, sea por la superficie, sea por lo lar- go de los bordes, sea en las nervaduras délas hojas. Algunas veces se presentan desnudos en la superficie de la fronde, pero con mayor frecuencia una membrana delgadita que parece un pliegue de la epidermis les cubre y toma entonces el nombre de indusio, que for- ma como una cápsula cercando el soro, pero las mas veces le cu- bre á manera de una tapa con goznes; otras veces está pegado por un punto único ó según una línea prolongada; todos los caracteres sacados de la forma de los soros, de la del indusio, de su adheren- cia, figura y dirección sirven para diferenciar los géneros entre sí. Las capsulitas consideradas aparte, son sentadas ó mas ó menos pe- diculadas; los esporos se forman en su interior cuatro por cuatro en las celdillas madres, las cuales al principio están soldadas entre sí, formando un tejido continuo que, reabsorviéndose mas adelante, deja los esporos libres en la cavidad de la capsulita. Análisis dicotómica de ¡as varias úriius. 1. Esporanjios situados sobre las hojas, 2. — Esporanjios no si- tuados sobre las frondas, 4. 2. Ceñidos por un anillo, 3. — No ceñidos por anillo alguno, 7. 3. Capsulitas provistas de un anillo vertical ó escéntrico, senta- das ó pediculadas y transversalmente dehiscentes ; frondas simples ó compuestas. T. L Polipodiáceas. Polypodium síispeusnm, P. — P. cataguaJa. — Ásplenium serrahcm, L. — Adiantum trapeziforme, L. — Pteris pedoAa, L. — Capsulitas situadas en un receptáculo formado por una vena prolongada mas alUV de la márjen de la fronda, sentadas, ceñidas por un anillo completo escéntrico, transversal respectiva- mente al punto de inserción horizontal ú oblicuo, irregularmente de- hiscente. Esporas convexas ó tetraedras apiramidadlas ; indusio con la textura de la fronda. Tallo rastrero cuyas frondas, ordinaria- mente tiernísimas y casi transparentes, son destituidas de estomas. T. IL HiMEXEOFÍLEAS. Martewzia dichotoma, Sw. 4. Anillo completo, 5. — Anillo incompleto, ancho, dorsal, de- hiscente por el vértice ; esporas oblongas ó casi globosas; indusio variado; frondas bipiñadas; esporangios epifilos ó situados de to- dos lados en frondas contraidas, estipitadas ó tenuísimamente mem- branosas. T. IIL OsMUNDÁcEAS. Osmoiidu lancea. C. T. V., 312. 5. Esporanjios sin receptáculo, 6. — Esporanjios situados sobre un receptáculo frecuentemente mas ó menos elevado, sentados; anillo ancho y escéntrico; esporas triquetras ó trilobas. T. IV. Cyatheáceas. Cyatliea speciosa. C. T. V., 702. 6. Esporanjios sub-globosos ; anillo vertical; esporas sub-globo- 22 DIVISIÓN PRIMERA. AGAMOS. sas ú oblongas. T. V. Polipodieas. — Esporanjiosbipofilos tenuísi- mamente membranosos ; anillo incompleto, anclio, aproximado por la base aveces á penas cercada. T. "VI. Parkerieas. 7. Sentados, libres ó entresoldados, abiertos por el ápice ó late- ralmente; esporas elipsoideas; indusio nulo, superficial ó unido á los esporanjios; frondas simples, pinadas ó triplo-pinadas. T. VII. Marátiáceas. MaratMa alata, Senth. — Esporanjios sin anillo alguno , sentados uniloculares ó casi biloculares con un tabique transversal incompleto, libres ó entresoldados, semi-bivalves ; es- poras farináceas. Frondas fuera del tallo rizomatoideo, apareadas, bi-formes apretadas en la vernacion; las estériles estendidas, sim- ples ó compuestas, mientras las fértiles son reducidas al raquis ó peciolo común, llevando los esporanjios dispuestos en espiga ter- minal, dística, articulada, uniloculares, y abriéndose transversal- mente. T. VIII. Ofiogloseas. Ophyoglossum reUculatton ; C.T.V., 799; hotricMwm cicutarmm, Sw. Familia 6. — LICOPODIACEAS. — Primorosos y elegantísi- mos vejetales mas ó menos herbáceos, inter^iedios entre los mus- gos y los heléchos por su semblante, cuyo tallo derecho, mas ó me- nos largo y rastrero, simple ó ramoso está vestido de muchísimas hojuelitasmas ó menos empizarradas, dísticas ó esparcidas, vivaces. Fructificaciones axilares ó terminales, cuyos órganos reproductores son los unos cajitas, ó saquitos globulosos ó reniformes y unilocula- res, conteniendo una infinidad de granitos ó esporitos, mientras los otros consisten en cápsulas ó sacos mayores que se abren por dos ó tres ventallas y contienen solamente tres ó cuatro esporos mas gruesos. En el primer período, estas dos clases de sacos presentan igual apariencia é igual modo de desarrollarse; en el interior de una envoltura celulosa se organiza un tejido celular, cada cual de sus celdillas está llena de una masa granulosa, la cual mas adelante se parte en cuatro masas secundarias. En la mayor parte de los sa- cos ó cajitas, á cierta época de su vida, las paredes de las celdas madres están reabsorbidas y los granos formados por grupos de á cuatro, es decir las esporas pequeñas se aislan, se vuelven libres en la cavidad común y luego se huyen por una hendidura ; en un pe- queño número de saquitos situados mas inferiormente todas las cel- das madres abortan cí)n sus granitos, escepto una, la cual toma un desarrollo considerable y acaba por formar las cuatro esporas grue- sas, llenendo el saco ensanchado, moldado sobre ellas y que se abre á la sazón para dejarlas salir. Las pequeñas esporas sembradas á lo largo se modifican, y al cabo de unos cuatro ó cinco meses su inte- rior se halla lleno de un tejido celular mu^^ fino; cada una de cuyas celdillas contiene un cuerpecito filiforme, arrollado en arco ó en espira que es un anterozoíde y la espora no es otra cosa sino una anteridia que revienta al fin por uno de sus estremos para dejar sa- lir las utriculas, las cuales agujerean las anterozo'ides que se mue- ven como suelen hacerlo. Las esporas mayores, después de un tiem- po mas largo, producen por su vértice una capa celulosa en la cual se forman algunos archegonos. En una celda, al centro de uno de ellos, se desarrolla, se presenta y crece un cuerpecito celuloso que CLASE V. — FELICÍNEAS. 23 es casi un embrión lejítimo. Lycopodium cermmm , L. L. linifoliiim; L. flahellatum. C. T. Y., t. 2,^01. Familia 7. — EQUISETA CEAS. — Vejetales herbáceos viva- ces V que se crian en los terrenos húmedos, cuyos tallos ó especies de cañas son huecos interiormente , con tabiques que corresponden á las articulaciones j cuya parte sólida, casi enteramente celulosa, presenta vacíos ó claros mucho mas pequeños y dispuestos en uno ó dos arcos, acompañados de algunos vasos anulares. De las articula- ciones salen ramitas mas ó menos numerosas y verticiladas : entre ellas y pegada al tallo se halla una vaina membranosa que sale también del nudo, mas ó menos larga y terminada por cierto número de lacinias ó dientes, que ha de considerarse como una hoja única amplexicante, en el espesor de la base de la cual nacen las ramitas adventivas que la agujerean para salir. Ese tallo se termina por una especie de cono ó pina formado por la reunión de muchas escamas claviformes y perpendiculares al eje. Por debajo de la cabeza de cada uno de esos clavos nacen saquitos, cápsulas ó esporanjios dis- puestos en arco, los cuales á su madurez se agrietan lonjitudinal- mente y dejan salir un sin número de esporas, cada una de las cua- les se presenta bajo la forma de una masa celulosa, de cuya parte inferior salen cuatro hilos clásticos ó elaterios, cuyos movimientos favorecen la diseminación. Al principio el saco estaba lleno por un tejido celular continuo y después en esas celdillas, según la ley co- mún, se han formado cuatro utrículas, las cuales *\"ueltas libres mas adelante dan nacimiento en su interior á otra utrícula adherente á la primera por un punto único ; esta última constituye la espora y la primera los dateros. Equisetum giganteum. C. T. V., 54. DIVISIÓN SEGUNDA VEJETALES FANEROaAMOS O COTILEDÓNEOS SUB-DIYISION I. — MONOCOTILEDONEOS. SECCIÓN I- — ALBUMINADOS. ORDEN I*'. « Yejetales de periantio nulo, simple, mas ó menos petaloideo ó que no parece corola de ninguna manera j cuyas semillas están provistas de albumen óendospermo farináceo. SUB-ÓRDEN !•'. — APERIAKTEOS. Yejetales de flores sin periantio alguno, el cual está á veces re- emplazado por unas escamas que acompañan á las ñores, pero que no constituyen una envoltura floral lejítima. CLASE IV. — AROÍDEAS. Familia 8. — ARACEAS. — Vejetales ordinariamente herbá- ceos, sin tallo lejítimo ; sin embargo algunos tienen uno que es una especie de caña sólida un poco análoga á la de azúcar ; algunos son trepadores, y entonces los tallos mas ó menos ramosos son muy lar- gos : raices fibrosas saliendo casi siempre de una i;izoma mas ó me- nos desarrollada y feculenta , de la cual nacen á veces muchos tuberculitos ó hijos. Hojas sencillas, radicales en las especies des- provistas de tallo, cuyo largo peciolo es envainador por la base, alternas, de limbo á veces muy grande, frecuentísimamente con fi- gura de flecha ó de alabarda, entero ó lobado raras veces, alguna rara vez agujereado, arrolladas en la yema. Flores en espádice ter- minal en el vértice de un bohordo mas ó menos largo en las especies MONOCOTILEDÓNEOS. — CLASE IV. — AROÍDEAS. 25 sin tallo, pedunculado y axilar en las otras, ceñido por una espata las mas veces coroliforme ó foliácea, mas ó menos grande, con figura de cartucho, libre ó mas ó menos soldada con la parte inferior del espádice, persistente 6 caduca. Tales flores son ordinariamente mo- noicas y raras veces herraafroditas ; las femeninas ocupan la parte inferior del espádice, mientras que las masculinas están mas supe- riores ó cubren su vértice, y separadas las unas de las otras por nectarios glandulosos de forma variada; raras veces las femeninas y las masculinas están entremezcladas las unas con las otras; el vértice del espádice está casi siempre desnudo; su forma, tamaño y color son muy variados. Flores enteramente desnudas ó ceñidas por escamitas en número variable de cuatro á seis y que parecen des- empeñar las funciones de cáliz; estambres y pistilos en número de- finido ó indefinido ;l estambres hipojinos de anteras 1, 2 ó polilocu- lares ovales y estrorsas. El fruto consiste en una baya redonda, unilocular ordinariamente ó plurilocular monosperma por aborto, cuyas semillas tienen un embrión cilindrico, derecho y axil. Análisis (Ucotomica de las tribus y svMriliis. 1. Flores monoicas siempre enteramente desnudas, con los pisti- los situados siempre por la base del espádice y los estambres en la parte superior, separados los unos de los otros por órganos sexuales rudimentarios formando un anillo mas ó menos grande; bayas las mas veces uniloculares monospermas; embrión axil, antitropo ó anatropo. Espata envolvente y persistente. T. I. Aráceas, 2. — Flores hermafroditas y algunas veces monoicas entremezcladas con cuatro ó seis escamas calicinales acompañando a otros tantos es- tambres ; espádice enteramente cubierto de flores y cilindrico ; es- pata pequeña caduca envolvente ; estambres hipojinos ó períjinos en número de 1,4 y 8, cuyas anteras, siempre biloculares, se abren lonjitudinal ó transversalmente. El fruto es una baya de dos celdas monospermas, ó una cápsula ya unilocular y monosperma, ya trilo- cular ó polilocular. Óvulos semireflexos; embrión axil. T. II. Oron- ciáceas, 5. 2. Ovario plurilocular, estambres distantes de muchos pistilos verticilados situados cerca de la base del espádice, S.T. I. Cripto- CORINEAS. — Ovario unilocular. Flores femeninas separadas de las masculinas por órganos-sexuales rudimentarios interpuestos, 3. 3. Espádice s'^mpre libre y sin adherencia con la espata, 4. — Espádice raras veces libre, pero mas ó menos soldado con la espata, estambres y pistilos numerosos contiguos con los órganos sexuales rudimentarios comunmente mezclados con los pistilos; espádice ra- ras veces desnudo por el vértice. Anteras cuyas celdillas están hun- didas en el conectivo muy grueso y abroquelado. S.-T. II. Anapo- REAS. Bieffenl achia seguina, Schott. C. T. V., 4. 4. Anteras cuyas celdillas están hundidas en el conectivo muy grueso y abroquelado ; estambres y pistilos numerosos contiguos ó separados por interposición de órganos sexuales rudimentarios ; ver- 26 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. tice del espádice frecuentemente desnudo. S.-T. III. Caladieas. Colocasia esculenta, Schott. Caladium Mcolor, Schott. Xantho.^oma edide, Schott. X sagütafoUa, Schott. Syngoriimí auritum, Schott. Philodendron hederaceum^ Schott. C. T. V., 1*73-1-2. — Anteras no hundidas en el conectivo por ser mayores que él; estambres y pisti- los ó flores muchas con órganos sexuales rudimentarios interpuestos; vértice del espádice siempre desnudo. S.-T. IV. Dracunoulineas. Artím arhorescens. C. T. Y., 1*77. 5. Flores enteramente desnudas. S.-T. I. Galeas. Monstera can- TKsfolia, Schott. C. T.Y., 221. — Flores provistas de escamas, reem- plazando el perigonio, 6. 6. Hojas planas enteras ó palmatisectas. S.-T. II. Oroncieas. Potitos scajidens, Lin. Dracontmm polypliylUim, L. : C. T.V., 178. — Hojas ensiformes abrazadoras en la estivacion. S.-T. III. Aco- eoideas. Familia 9. — TYFACEAS. — Plantas herbáceas vivaces, de raíz algo carnosa, que se crian en los lugares algo pantanosos ; con hojas simples, muy largas, estrechas, derechas, lanceoladas, en- vainadoras por la base y alternas. Flores numerosísimas unisexuales y monoicas, dispuestas en espádice terminal formando especies de amentos gruesos y cilindricos, de los cuales el masculino ocupa la parte superior y el femenino la inferior, separados por un trocito desnudo del eje, ordinariamente provisto de una espala foliácea, estrechay, caduca. Las flores masculinas son formadas de un cáliz trifilo ó reemplazado por escamitas ó por pelos y de tres estambres; las femeninas se componen de un cáliz igual ó formado de seis esca- mitas, de un ovario supero simple unilocular con un solo ovalo pen- diente terminado por un estilo único con un estigma dilatado, como membranoso y marcado de un surco lonjitudinal. Fruto indenis- cente, aquenio, cuya semilla es formada de un endosperma farinoso conteniendo en su centro un embrión axil y cilindrico de radícula superior. Tyj^lia angiistifolia, L. : C.T.Y , 703. sub-óeden 2. Periantio reemplazado por escamas ó brácteas escamosas que des- empeñan sus funciones. CLASE Y. — GLÜMÁCEAS. Familia 10.— GRAMÍNEAS. —Plantas ordinariamente her- báceas anuales ó viváceas, algunas de las cuales se vuelven casi ar- bolitos en los paises tropicales, de raices fibrosas y capilares, sa- liendo á veces de un rizoma ; caña mas ó menos gruesa herbácea ó leñosa, ordinariamente hueca y atabicada. pero á veces también só- lida y mas ó menos suculenta, siempre cilindrica, con hojas alter- nas ó dísticas, simples, lanceoladas mas ó menos estrechas, provistas de una vaina bastante larga, cuya inserción abraza el nudo y es abierta; de su parte posterior y opuesta á su hendidura sale el lim- MONOCOTILEDÓNEOS. — CLASE Y. — GLUMACEAS. 27 "bo mas ó menos largo y siempre estrecho, separado ordinariamente de ella por una especie de estrechamiento provisto interiormente sea de una membranita truncada, aguda, entera ó laciniada, á veces reemplazada por pelos, que se llama lígula. Flores ordinariamente hermafroditas, raras veces unisexuales, monoicas ó polígamas, dis- puestas en espigas ó en panojas, formadas por la reunión de espi- guitas, terminales ó axilares, sencillas ó compuestas y siempre glu- máceas, es decir que su envoltura floreal se compone de dosbrácteas mas interiores y de cuya axila salen los estambres; se llan.tan paleas y están opuestas dos por dos; ordinariamente se hallan además por fuera del estambre mas esterior dos escamitas llamadas paleólas ; las escamas de la gluma se terminan con bastante frecuencia por una arista mas ó menos desarrollada y de forma variada situada por el vértice que otras veces es mútico, entero ó recortado. Estambres hipójinos ordinariamente en número de tres, son algunas raras ve- ces 6, 2 ó 1, de filamentos capilares y largos sosteniendo anteras grandes esertas, biloculares, basiñjas y bífidas por ambos, estremos, el pistilo se compone de un ovario único supero, unilocular, monos- permo, terminado por dos estilos, bastantes veces soldados entre sí y formando uno solo con estigma mas ó menos largo, erizado ó plu- moso. El fruto es una cariópside rarísimas veces un aquenio, de forma y tamaño bastante variados, desnada ó envuelta en las ven- tallas de la gluma que se desprende con ella, cuyo embrión discoideo está aplicado á la parte inferior y lateral del endospermo farinoso y ordinariamente bastante grueso. Análisis dicotómica de las trihis qtie constituT/en esa grande familia. 1. Ordinariamente 6 estambres. Espiguitas uniflores, que suelen con frecuencia carecer de gluma por causa de aborto, otras veces bi ó triflores ; tienen una ó dos flores inferiores neutras y con una sola pajita, flor terminal fértil; pajita tiesa; flores con frecuencia de- clines. T. I. Orizeas. Oriza sativa, L. Phanis laj)ulaceus. C.T. V., 184-6*75. — Kuncajamás seis estambres, 2. 2. Espiguitas hermafroditas, polígamas ó monoicas; las mas veces con una sola flor, con ó sin rudimento de otra flor superior ; otras veces son biflores, cuyas dos flores son hermafroditas ó masculinas; en fin tienen también -dos ó tres flores cuya terminal es fértil y las otras incompletas ; glumas las mas veces iguales; pajitas frecuente- mente lustrosas y endurecidas con el fruto; estilo y estigma casi siempre elongado^ T. II. Falaeideas. — Zea mais, L. Andropo- gon citrahim, L. A. squarrosíim. L. A. insidare, L. : C. T. Y., 182- 219-220-340. — Espiguitas siempre hermafroditas, 3. 3. Bifloras ó unifloras, — 4. Multifloras, 12. 4. Solamente bifloras ó multifloras ala vez, 5. — Unifloras úni- camente, ó á la par uni y multifloras, 8. 5. Solamente bifloras, cuya flor inferior es incompleta ; las glu- mas, cuya inferior y también ambas suelen abortar, son mas delga- 28 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. ditas que las pajitas que con frecuencia son mas ó menos coriáceas y las mas veces múticas; la inferior cóncava; cariopside, comprimida paralelamente con el embrión. T. III. Paníceas. — Panicmn itali- cv^ni, L. V . miliaceum. — Bifloras, unifloras y multifloras á la vez, 6. 6. Bifloras, uni ó trifloras, 7. — Bifloras ó multifloras, cuya ter- minal está las mas veces achaparrada , tienen dos glumas y dos pa- jitas membranosas y herbáceas; la pajita inferior está las mas veces provista de una arista dorsal y torcida. T. lY. Avenáceas. Avena sativa, L. 7. Bifloras ó unifloras situadas sobre un eje articulado, de las cuales flores una es sentada, mientras la otra es pediculada, cuando mellizas; pajitas membranosas nunca en forma de quila, cuya infe- rior está frecuentemente provista de una arista; hay dos estilos. Flores dispuestas en panojas mas ó menos flojas, las dos ventallas de la gluma llevan pegado por fuera una especie de penacho de pe- los largos y sedosos ; ambas ventallas de la gluma inferior son lam- piñas. T. V. Saoaríneas. Sacchartim officinale, L. : C. T. Y.,420. — Bifloras, uni ó trifloras colocadas en las escavaciones del eje, ya solitarias, ya apareadas con una pedicelada frecuentemente dese- cada; una flor de cada espiguita inferior ó superior con frecuencia incompleta. Gluma de una ó de dos valvas, casi siempre coriáceas, algunas veces enteramente deficientes. Pajitas membranosas mu- chas ó raras veces cortísimas ó nulas. T. VI. Rotboeliaceas. 8. Unifloras solamente con ó sin otra flor rudimentaria, 9. — Multifloras siempre ó multi y paucifloras á la par, 10. 9. Siempre unifloras, sin rudimento alguno de otra flor, con pa- jitas enrolladas, provistas de una arista en su ápice y las mas veces endurecida con el fruto ; tal arista es simple ó trífida, muya menudo torcida y articulada por su base; ovario estipitado y las mas veces conescamitas. T. VII. Estipáceas. — Unifloras raras veces con otra flor rudimentaria subulada y superior ; hay dos glumas y dos pajitas membranosas y herbáceas cuya inferior tiene bastantes veces una arista; estigmas las mas veces sentados. T. VIII. Agrostídeas. 10. Unifloras con ó sin el pedículo de otra flor superior ó multi- floras, las mas veces cubiertas de pelos suaves ó cuya sola base está envuelta por ellos ; dos glumas y dos pajitas membranosas y herbá- ceas; tales glumas son á menudo iguales con las flores ó mas largas que ellas; pajita inferior aristada ó mutica. T. IX. Arundináceas. Arundo donax, L. : C.T.V., 621. — Unió multifloras, sin estar nunca cubiertas de pelos, 11. 11. Cuya reunión forma espigas unilaterales de flores superiores achaparradas ; dos glumas y dos pajitas membranosas y herbáceas las últimas de las cuales son músticas y con aristas á la par ; glumas persistentes en el eje de la espiga, la superior de las cuales mira á fuera. Espigas digitadas ó apanojadas. Muy raras veces solitarias y de eje nunca articulado. T.X. OiiLomT>¥.AS. Cynodon dactylon. — ,Con frecuencia provistas las flores de una arista ; la superior de estas es achaparrada ; hay dos glumas y dos pajitas herbáceas, las primeras faltan raras veces. Estigmas sentados en el vértice de un ovario pro- MONOCOTILEDÓNEÜS. — CLASE V. GLUMÁCEAS. 29 visto de pelos; inflorescencia en espiga. T. XL Hordeáceas. Hot- deum vidga7'e, L. Triticum sativícm, L. 12. Multifloras j raras veces paiicifloras ; dos glumas y dos paji- tas membranosas j herbáceas, rara vez coriáceas ; pajita inferior las mas veces provista de una arista no torcida; inflorescencia casi siempre apanojada. T. XII. Festucáceas. Bamhisa ganclua, L. C. T. V., ¡419. — Bromii^s. —Dos espiguitas multifloras siempre, cuyas flores superiores están apanachadas; tienen dos glumas, dos pajitas membranosas y herbáceas ; cuya pajita inferior es tri ó mul- tifida con sus divisiones subuladas y terminadas á manera de arista. T. XIII. Papoforeas. Familia 11. — CIPERÁCEAS. — Plantas herbáceas que se crian ordinariamente en los suelos húmedos, cuyas raices fibrosas y capilares salen con bastante frecuencia de un rizoma mas ó menos desarrollado, de tallo sólido, raras veces nudoso, casi siempre trian- gular, con hojas simples, estrechas y largas ó lanceoladas, enteras, muchísimas veces cortantes y ásperas , cuyo limbo sale de una vaina cerrada, alternas ó trísticas; las superiores no tienen vaina. Flores hermafroditas ó unisexuales, en espigas terminales ó espi- guitas agrupadas de varios modos. Tales flores se componen de una escamita que tiene lugar de cáliz, de tres estambres ordinariamente, pero cuyo número puede variar de 1 á 12, cuyo filamento delgado y capilar mas ó menos largo sostiene una antera de vértice puntiagu- do y de base bifida, basifija y bilocular , son hipójinos; de un pis- tilo formado de un ovario supero con un huevecillo derecho, cuyo vértice lleva un estilo bi ó trífido con estigmas filiformes y velludos; al esterior del ovario se hallan algunas veces cerdas ó escamitas en número variado y que no son otra cosa sino estambres abortados ; algunas veces en las flores femeninas el ovario está escondido tras una envoltura particular ó utrícula que se abre para dejar salir el estilo y cuya abertura ó boquita está provista de dos dientecitos. El fruto es un aquenio corneo ó membranoso, globoso ó comprimido, triangular ú ovoideo, cuya semilla tiene el embrión con forma de trompo situado en su parte mas inferior, esterior y lateral sobre un endospermo farinoso. Análisis dicotómica de las varias tribus. 1. Espiga ó espiguitas diclines, 2. — Espigas nunca unisexuales pero siempre hermafroditas, 5. 2. Diclines ó andrójinas á la par, 4. — Andrójinas ó diclines so- lamente y nunca á la vez, 3. 3. Solamente andrójinas monocárpicas con pajas numerosas in- sertas en muchas series sobre el eje discoideo, deprimido y apreta- damente empizarradas, cuyas internas están incluidas en las ester- nas mayores y monandras, algunas de las inferiores están vacías ; flor hermafrodita terminal con las pajas íntimas de 3 á 12, monan- dras y como ceñidas de un perigonio paleáceo y poliandro ; perigo- nio propio y disco nulo ; estilo bió quinquefido ; cariopside crustácea, ♦ f 30 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. globosa, arrugada y con el vértice desnudo. T. I. Crisitriqueas. — Solamente diclines, cuyas masculinas tienen las pajitas dísticas ó empizarradas en muchas series; las ínfimas algunas veces están va- cías; estambres tan pronto 1 como 3 y raras veces 5. Espiguillas femeninas uniñoras, con muchas glumas empizarradas en muchas series y algunas veces nulas; dos paleas ó pajitas opuestas ó casi opuestas; perigonio siempre nulo; disco mas ó menos manifiesto: cariopside como huesosa, hoyosa ó cancelada. T. II. Esclerieas. Scleria Jlagellum, Sw. 4. Diclines, andrójinas y rarísimas veces dioicas, con involucro foliáceo ó espatiforme, cuyas masculinas simples son multífloras, con las flores empizarradas por todas partes, unipaliáceas; sin pe- rigonio alguno ; ordinariamente tienen tres estambres y rara vez solo dos. Espigas femeninas simples ó compuestas con espiguillas empizarradas por todas partes; andrójinas, casi siempre unifloras por aborto ; se componen de dos glumas cuya delantera es plana y la trasera bicarenada, juntas por las márjenes desde la base hasta el ápice en un odrecillo ó utrícula bidentada, persistente, contenien- do un ovario con un pedicelo estéril, setiforme, rarísima vez fértil y masculifloro ; pajas y perigonio nulos; estilo bi ó trífido. Cariopside lateralmente comprimida ó trígona con el ángulo dirigido al eje. T.III.Caríceas. KiUi)igia odor ata, Kih.C. T.V., 286. — Monodicli- nes con espiguillas unifloras, unisexuales, bi ó' plurífloras, andróji- nas, cuyas masculinas son algunas veces reducidas al solo pedicelo; gluma única y delantera; pajas dos paralelas aleje ; binas en lasflores unisexuales, cuya trasera inferior y mayor es abrazadora, mientras la delantera superior y menor es deficiente en las espiguillas andró- jinas; perigonio nulo ó multisetoso, con las cerdas muy lisas, blan- das y mas cortas que las pajas; estambres siempre tres ; cariopside trígona casi siempre^picuda, por persistencia de la base del estilo. T. IV. Elineas. Hypoporum hirtellum, Nees. 5. Hermafroditas ó polígamas, 6. — Solo hermafroditas, 7. 6. Con frecuencia polígamas paucífloras ó unifloras con las pajas dísticas ó empizarradas en muchas series ; las ínfimas y las supre- mas algunas veces vacías ; perigonio formado de cerdas ásperas, pestañosas ó plumosas, libres ó entresoldadas por la base, algunas veces también unidas al disco frecuentemente desvanecido, raras ve- ces son desvanecidas ; estambres 3 ; cariopside cartilajinosa ó crus- tácea, separada por la base del estilo y variamente ensanchada. T.Y, Rincosporeas. Ramireamaritima, Aubl. C.T. V.,344.* — Rarísimas veces polígamas, multifloras, rara vez uni ó trifloras, con pajas ditís- ticas ó empizarradas en muchas series ; perigonio nulo, algunas veces cerdoso ó membranáceo ; 2 ó 3 estambres fértiles; disco mas ó me- nos distinto, membranoso, acubileteado, truncado ó lobado. Algu- nas veces desplegado en estaminodios separados en torno del estí- pite cariopseo y pegado á él con la márjen libre y arrimado á la base del fruto; estilo bi ó trífido, rarísimamente simple y tridentado en el ápice ; cariopside crustácea ó cartilajinosa trígona y ceñida del disco. T. VI. Fuireneas. 7. Siempre unifloras, 10. — Uni-trifloras ó multifloras, 8. MONOCOTILEDÓNEOS. — CLASE VI. — JONCÍNEAS. 31 8. Uni ó trifloras con pajas empizarradas en muchas series, cuyas inferiores están siempre vacías mientras las del estremo son sola- mente floríferas; perigonio nulo ; los estambres varían de 2 á 12 y muchas veces de 3 á 6 y casi siempre prolongados después de la flo- ración, transversa] mente pegados y adherentes á la cariopside; dis- co nulo ; estilo bífido, con los brazos frecuentemente bífidos tam- bién ; raras veces bulboso por la base , y con mayor frecuencia enteramente caedizo ; cariopside huesosa, gruesa, durísima, fre- cuentemente engrosada por el ápice, desnuda ó coronada por la base tenue del estilo ; algunas veces drupácea con cascara frágil, separa- ble del endoscarpio crustáceo, rarísimamente crustácea, ventruda y coronada del bulbo del estilo. T. YII. Cladieas. — Multifloras, 9. 9. Multifloras siempre y embricadas con las pajas por todos lados ó raras veces dísticas empizarradas, todas conformes, cuyas ínfimas son estériles; perigonio nulo ó cerdoso con las cerdas capilares, es- cabrosas hacia atrás, otras veces muy lisas, prolongadas después de la florescencia, raramente comprimidas y lineares ; disco nulo; es- tilo bi ó trífido con la base frecuentemente bulboso-engrosada y persistente ; cariopside crustácea comprimidita, desnuda en el ápice ó arrejonadita y rarísimas veces cnspidada. T. YIII. Escirpeas. Scir- puspalustris,L. : C. T. V. , 56. — Multifloras, raras veces uni ó trifloras, con pajas ó escamitas dísticamente empizarradas, todas conformes y casi siempre con las márjenes escurridas por los ángulos del eje. Peri- gonio raras veces existente y cerdoso con las cerdas erizadas hacia atrás; disco nulo: estilo bi ó trífldo, rarísimamente bulboso por la base y caedizo: cariopside crustácea, comprimidita, desnuda en el ápice ó arrejonadita y rarísimamente cuspidata. T. IX. Cipereas. Ciperus articidatíis, L. C. hydra, L. C. odorata, L. C. elegans, L. C.T.V., 55-185-222. 10. Pajas 2 ó 4, algunas veces solitarias ; perigonio y disco nulos, estambres de 2 á 3, ó de 3 á 8; estilo bifldo, cariopside comprimida, desnuda en el ápice ó acorchado-engrosada, algunas veces picuda por la persistencia de la base del estilo. T. X. Hipolitreas. SUB-ÓRDEN 3°. Periantio escamoso ó petaloídeo ; semillas con embrión antitropo estrario. CLABE VI. — JOXCÍNEAS. Familia 12. — COME LÍNEAS. —Plantas herbáceas, ordina- riamente vivaces, de tallo herbáceo carnudo, algo nudcfso, con ho- jas simples, estrechas y bastante largas ó lanceoladas, envainadoras por la base, alternas y dísticas. Flores hermafroditas dispuestas por grupos axilares ó terminales, á veces como apanojadas, contenidas en brácteas foliáceas y como espaliformes ; se componen de un pe- riantio de seis divisiones cuyas tres esteriores son verdes y como foliáceas, mientras las tres interiores son petaloideas; estambres de 32 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 3 á 6; cuando son 3 están acompañados entonces por tres filamentos "estériles, todos con glandulitas ó pelos articulados, de anteras, in- trorsas y biloculares ; pistilo compuesto de un ovario supero, trilo- cular, dispermo, cuyo vértice lleva un estilo único con estigma sen- cillo. Cápsula bilocular con dos semillas peltadas en cada celda, abriéndose por 3 ventallas, placenta axil; endospermo duro y car- noso, conteniendo alojado, en una cavidad opuesta al hilo, el em- brión con forma de trompo. Co7nmelma com7nvjiis, L. Tradescantia discGlor. C. T. V., 626-625-1S2. ORDEN 2°. Vejetales sin periantio ó que tienen este órgano doble, sepaloideo ó petaloideo ; semilla raras veces con endospermo farinoso. SUB-ÓRDEN 1°. APERIANTEOS.. CLASE VIL — PANDANOIDEAS. Familia 13. — PANDANÁCEAS ó PANDÁNEAS. — Veje- tales mas ó menos grandes, que á primera vista parecen palmeras, de hojas algunas veces grandes, alternas, simples ó compuestas, y entonces pinadas ó palmeadas y en forma de abanico. Flores mo- noicas ó dioicas dispuestas en espádice con una espata corta y ca- duca, cuyas masculinas se componen de un solo estambre, con antera sentada, sin perigonio ordinariamente y las femeninas están forma- das de un ovario monospermo unilocular ó plurilocular , de placenta parietal, con un estigma sentado; embrión corto y axil. Hojas simples, árboles que no parecen palmeras, pero casi bro- meliáceas giganteas; perigonio nulo. Pandaneas. Pandanus can- delahrum. C. T. V., 188. — Frondes ordinariamente grandes en aba- nico opinadas, á primera vista parecen palmeras; flores ordinaria- mente provistas de un perigonio. Ciclanteas. Cardidovica pal mata. Palmito de sombreros, se halla en Puerto Rico y en Cuba ; en el Perú se llama jipajapa y sus hojas sirven también para sombreros de Panamá. PJiitelephas macrocarpa, H. B. K.; marfil vejetal. SUB-ÓRDEN 2. — PERIANTEOS. GRUPO r. — ESPADIGIFLOROS. CLASE VIIL— FENOCOÍDEAS. Familia 14. — PALMERAS. — Primorosos vejetales cuyo tallo es un astil ó estipe mas ó menos grueso, ó mas ó menos delgado, cuyos entrenudos son ora muy cortos, ora separados los unos de los otros por trozos largos, lisos y lustrosos; otras veces su superficie está vestida con la base persistente de las hojas, y, después de des- MONOCOTILEDÓ^^EOS. CLASE VIII. — FENOCOÍDEAS. 33 prendidas estas, se queda desigual, rugosa y agrietada; algunas ve- ces provistas de espinas derechas mas ó menos largas j fuertes ; otras veces, aunque raras, el tallo está reemplazado por un rizoma; raices fibrosas, de las que muchas son adventivas y forman por la base un cono mas ó menos grueso. Frondes ú hojas que on ciertas especies alcanzan mas de 25' de largo, están dispuestas á manera de corona en el vértice del astil, ó alternas en las especies de tallo pequeño y larguísimo j como sarmentoso ; radicales cuando falta el tallo; sim- ples ó compuestas j provistas de peciolos largos y muy fuertes; tie- nen figura de abanico son palmatisectas ó pinatisectas ó pinadas , de prefoliacion pilcada; una vaina mas ó menos grande y leñosa se halla siempre en las bases del peciolo, la cual se revienta por los progre- sos de la vejetacion ó al desprenderse la fronde. En las axilas de las frondes, cualquiera que sea su posición, nacen las flores dispuestas en .espádices simples ó frecuentemente ramosos, envueltas por una es- pata mas ó menos espesa, dura, leñosa, de forma y tamaño muy va- riados, única ó múltiple, completa ó incompleta, que suele faltar al- gunas raras veces; la cual se abre á la sazón para dejar salir el espádice á fuera y verificarse la floración ; tales flores son herma- froditas ó polígamas, monoicas ó dioicas y formadas de un periantio compuesto de dos verticilos de hojuelas coriáceas, cuyas tres inte- riores no tienen siempre la misma forma y la misma lonjitud que las esteriores y bastante á menudo se sueldan entre sí; estambres ordi- nariamente seis, raras veces tres solamente, algunas veces ma,s nu- merosas en las flores diclines, cuyos filamentos son libres ó mona- delfos, con anteras bastante grandes y biloculares : el pistilo se com- pone de 3 ovarios distintos ó soldados, así como los estilos son 3 ó 1, según la disposición del ovario correspondiente, con estigma mas ó menos prolongado. El fruto consiste en una especie de drupa mas r3 menos gruesa, cuyo hueso mas ó menos duro, mas órnanos grueso ordinariamente unilocular está contenido en una envoltura fibrosa muy espesa, carnosa ó como crustácea mas ó menos delgada. La semilla que llena el hueso con que se suelda y se confunde algu- nas veces, se forma de un perispermo espeso, generalmente muy duro, corneo ó cartilajinoso, frecuentemente ruminado, sólido ó hueco, y en ese caso mas ó menos lleno de agua, por la base y por los lados del cual se halla una cavidad en donde está anidado un em- brión pequeño que mira sea al hilo, sea por otro lado cualquiera ; al germinar la parte inferior del embrión se desarróllala primera, pe- netra en el interior del endospermo, vive á sus espensas, cuya sus- tancia modifica, bajo la infiuencia de su presencia y la vuelve el alimento necesario para el desarrollo de las otras partes del embrión que entonces pueden salir á fuera; véase lo que decimos sobre el particular al hablar de la germinación. Análisis (licotómica de Jas trihus. 1. Estambres hipcVjinos ó períjinos , muchas espatas mas ó menos incompletas y raras veces una sola completa, 2. — Estambres siem- pre y solamente hipójinos, 3. TUMO II , 3 34 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 2. Flores casi siempre unisexuales, monoicas ó dioicas, sentadas; frecuentemente cercadas por todas partes de brácteas j de bractei- Uas perfoliadas, espataceo-unidas j como ament-Aceas , dispuestas en espádices ramosos; ovario compuesto de 3 carpillos, raras veces de dos, primitivamente entresoldados j tribilocular ; huevecillo único en cada celdilla j derecho ; fruto casi siempre monospermo por causa de aborto, abajado, cuadriculado-corticado, con escamas primeramente derechas y después volteadas empizarradas, corneas. Frondes pinadas ó palmado-flebelliformes ó con figura de abanico, con alas reduplicadas, T. I.Lepidocaeíxeas. Mauritiajlexuosa. C. T. V., 186. — Flores casi siempre liermairoditas ó polígamas, dioicas, senta- das,sin estar acompañadas de brácteas; en espádices ramosos, á veces con figura de escoba ó como de abanico: ovario compuesto de 3 car- pillos primitivamente separados y por fin separados ó unidos en uno solo, todos ó algunos solamente desenvueltos, rarísima vez un car- pelo único ; cuyos liuevecillos, solitarios en las celdillas y dereelios, son laterales ó volteados, fruto abayado, triple, profundamente trí- lobo, simple ó doble por aborto, escluidos los carpillos abortados por la formación del desenvuelto, rarísimas veces solitario. Fron- des casi siempre palmado-flebelliformes , rarísimamente pinadas, con alas reduplicadas y coronando estirpes inermes. T. II. Corifi- NEAS. Plioenix clactüifera, L. Co2)ernicia tectorum, Mart. CkamcsrGps humüis, L. — C. T. V., 622. 3. Muchas espatas ó mas rara vez una sola : flores monoicas; alas de las hojas reduplicadas, 4. — Algunas espatas y nunca una sola; flores dioicas ; alas de las frondes induplicadas; flores masculinas de textura como giumácea, sumerjidas en los hoyuelos del espádice, formados por la reunión de las escamas salientes en la florescencia, como amentáceas ; espatas incompletas, articulado-envainadoras ó raras veces completas y del todo cubridoras de los espádices. Ovario compuesto casi siempre de 3 carpillos, raras veces de 2 ó de/4, pri- mitivamente entresoldados ; tri ó raramente bicuadrilocuiar, con huevecillo solitario en las celdillas, ascendente ó volteado ; fruto drupáceo ó raras veces abayado, indiviso ó lobado; frondes palma- do-flabelliformes opinadas. T. III. Borasínsas. 4. Flores primeramente reclusas dentro de una espata solitaria completa ó de muchas, de las caales la mas íntima está entonces completa y bracteada, sentadas ó sumerjidas en ho3'uelos trabados, á manera de alveolos, con las brácteas amarillo-blanquecinas; fila- mentos de los estambres confluyentes por la base; ovario compuesto de 3 carpillos, raras veces de 2, cuaternos ó senos primitivamente unidos, trilocular ó raras veces bi-cuadri-sexlocular, cuyos hueveci- llos, solitarios en cada celdilla, son derechos ó volteados. Fruto drupáceo, monopireneo, trilocular ó frecuentísimamente unilocular, con las celdillas abortadas, inclusas en la cascara ó en el endocar- pio huesoso ó lapídeo de la fértil; núcleo oleoso mas ó menos cohe- rente con un endocarpio craso por los vasos reticulados de la testa. Frondes grandes 3^ pinadas. T. IV. Coccíneas. Coccos nucífera, L. Blais occiclentalis. C. T. V., 568-624. — Flores sentadas en un ra- quis liso ú hoyoso ; las espatas faltan algunas raras veces ; ovario MONOCOTILSBÓNEOS. CLASE IX. — LIKIOÍDEAS. 35 compuesto de tres carpillos, raras veces de dos, primitivamente en- tresoldados, y tribiiocular, rarísimas veces con un solo carpillo uni- locular; huevecillos solitarios en las celdillas, rarísimas veces son dos, derechos ó laterales, suspendidos v con frecuencia en una ú otra celdilla faltos del todo. Fruto tiilocular profundamente trilobO; ó con mayor frecuencia uni-bilocular por aborto de las celdillas; abayado ó lijeramente drupáceo con el endocarpio de cada carpillo separado ó escluido de los abortados por formación del fértil. T. V. Arecíneas. Oréodoxa regia, H, B. K. O. olerácea, Mart. Euterpe ed'icUs, Mart. Iriartea andícola spreng. etc. C.T.V., 623-'o24-025. GUÜPO II-ASPABIGIFLOPiOS. CLASE IX. — LIRIOÍDEAS. SUB-CLASE 1». — SUPEROVARIEOS. .S. Familia 15. — MFLANTACEAS ó COLCHICaCEA. Plantas vivaces herbáceas que salen de una cebolla sólida ó de rai- ces fibrosas; hojas ordinariamente radicales, sencillas, con las ner- vaduras paralelas, pecioladas, con la base del peciolo envainadora, alternas en los tallos. Flores radicales hermafroditas ó en panojas, terminales, polígamas -^ sostenidas por un tallo herbáceo derecho, tan pronto hermafroditas como unisexuales ó polígamas y que cons- tan de un periantio á veces largamente tubulado ó no, regular, pe- taloideo, monóñlo y con seis divisiones mas ó menos profundas, de cuya base salen seis estambres opuestos á ellas, cuyos filamentos li- bres llevan anteras biloculares, estrorsas; pistilo formado de uno hasta seis ovarios con estilo simple ó trífido, que suele faltar raras veces, con estigma glanduloso. Cápsula trilocular abriéndose por tres ventallas, polisperma, ó el fruto se compone de tres ó mayor número de capsulitas agrupadas uniloculares, abriéndose por la cara interna y hacia el vértice, polispermas; semillas formadas, además del tegumento propio membranoso ó reticular, sobrecargado algunas veces hacia el hilo por un tubérculo mas ó menos voluminoso, de un endospermo carnoso que contiene un embrión cilindrico situado ha- cia el punto opuesto al hilo. Eaices ordinariamente fibrosas sin cebolla, perigonio de hojuelas libres ó sentadas, ó algunas veces unguiculadas ó coherentes por la base en un tubo cortísimo; fiores polígamas apanojadas. Yerá- treas. Veratrum sahadilla. C. T. V., 461-801. — Una cebolla só- lida; perigonio de hojuelas petaloideas larguísimamente unguicu- ladas, de las que algunas soldadas ordinariamente forman un tubo largo; flores hermafroditas. Colhhíceas. ColcMcum aiitumnale, L. Familia 16. — LILIÁCEAS. — Vejetales herbáceos vivaces, ordinariamente provistos de un bulbo ó de un rizoma ó leñosos, en- tonces arbustos y hasta árboles bastante grandes; hojas radicales alargadas, estrechas y envainadoras por la base, mas ó menos sen- 36 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. tadas, alternas y cuyas nervaduras son paralelas, algunas veces mu}^ carnosas. Flores hermafroditas ordinariamente, raras veces polígamas y unisexuales, dispuestas en espigas, en cimas ó en espe- cies de cabezas esféricas ó en panojas, situadas en el vértice de un bohordo mas ó menos largo, con frecuencia acompañadas de brác- teas parciales, y de una especie de espata membranosa general al- guna rara vez, otras veces axilares solitarias ó en grupos; constan de un periantio petaloideo con seis divisiones dispuestas en dos series concéntricas, conformes, tan pronto distintas como soldadas en tubo por la base; seis estambres opuestos á las divisiones y dis- puestos también en dos verticilos concéntricos, libres ó soldados con el tubo del periantio, hipójinos, cuyos filamentos llevan una an- tera bilocular. Pistilo único cuyo ovario se forma de tres carpelos correspondiendo con los tres estambres mas interiores y soldados en uno único, libre, trilocular, algo trigono polispermo, cuyos hue- vecillos están pegados en el ángulo interno según una ó dos series verticales, de cuyo vértice sale un estilo único triangular, termi- nado por un estigma trílobo ó por tres estilos distintos ; fruto cap- sular ó abayado; cápsula trilocular, loculícida, con tres ventallas cuyos tabiq^ues resultan de la duplicatura de las ventallas que son septíferas por en medio de su cara interna, con algunas semillas un poco planas y situadas en su ángulo interno, cuyo perispermo es carnudo ó cartilajinoso y contiene un embrión cilindrico cuya radí- cula está vuelta hacia el hilo, alguna vez que otra retorcido; de te- gumento propio crustáceo ó membranoso : cuando es una baya tiene tres, cuatro ó una sola celdilla por causa del aborto de las demás, con una ó dos semillas. Análisis dicotómica de las trihcs de esa familia. 1. Plantas bulbosas ó cuya raiz es mas ó menos tuberosa, 2. — Plantas nunca jamas bulbosas, ni tuberosas tampoco, 4. 2. Siempre bulbosas y herbáceas, cuyo perigonio tiene sus hojue- las libres ó coherentes en lo mas bajo de la base y con frecuencia nectaríferas; estambres insertos en el receptáculo ó en la base del perigonio ; fruto capsular cuyas semillas anátropas son comunmente comprimidas con tegumento moreno-verdusco, esponjoso ó duro; tienen el embrión diminuto, recto ó encorvado, situado en la base del albumen. T. I. Tulipáceas. Lilium. — Bulbosas ó con raices ama- nojado-fibrosas y algunas veces tuberosas, herbáceas, cuyo perigo- nio tubuloso es sexpartido y lleva algunas veces los estambres pe- gados en su tubo, otras veces están insertos en el receptáculo. Ova- rio trilocular con muchos huevecillos ó en número casi definido, anátropos ó anfítropos, que se vuelve cápsula ó especie de baya, cuyas semillas anátropas ó anfítropas son globosas ó angulosas, con tegumento crustáceo negro y frágil j tienen un embrión recto ó in- versamente encorvado con la raicilla dirijida al hilo, 3. 3. Plantas herbáceas siempre bulbosas, cuyo periantio tubuloso y sexpartido lleva los estambres insertos en su tubo, otras veces lo MONOCOTILEDÓNEOS. LIElOÍDEAS. 37 son en el receptáculo ; fruto capsular. T. II. Jacinteas. Scilla Pe- ruviana. AUmm saücíim, etc. L. : C. T.V., 346-422-848. — Yerbas con raiz fibrosa ó tuberosa, cu^^o perijionio es patente; huevecillos por lo común anfítropos y fruto capsular. T. III. Antekíceas. 4. Nunca bulbosas, pero cuya raiz es tuberosa ó fibrosa; yerbas perennes cu^^o perigonio tubuloso con limbo se3.fido lleva los estam- bres insertos en el tubo; fruto capsular con semillas anátropas, com- primidas, cuyo tegumento membranáceo es frecuentemente pálido; embrión axil. Agapánteas. Polyantliesttilerosa, L. — Nunca bul- bosa, ni tuberosa tampoco, 5. 5. De raices fibro-amanojadas ó solamente fibrosas; plantas her- báceas crasas, algunas veces frutescentes ó árbores; perigonio tubu- loso sexfido ó sexdentado y algunas veces sexpartido ; estambres insertos en el receptáculo ó en el tubo perigoniai; ovario trilocular con los huevecillos anátropos; fruto capsular ó abayado con semi- llas comprimidas angulosas ó aladas, de tegumento membranáceo pálido ó negro y con embrión ortotropo. T. IV. Aloíneas. Aloe spi- cata, L. — C. T. V., 525. — Tueca aloefolia. Raices siempre fibro- sas saliendo con frecuencia de un rizoma ; plantas ordinariamente herbáceas; flores hermafroditas, polígamas ó unisexuales raras ve- ces; de perigonio con cuatro, seis 3^ hasta ocho divisiones, cuya base adhiere con los estambres libres ó rarísimamente monadelfos; ova- rio de dos ó tres celdas con uno ó con dos huevecillos; baya tri ó cuadri locular, ó unilocular por aborto. T. Y. Asparagíneas. ás- parragns officinalis, L. — C. T. Y., 345. Familia 11. — FSMILACEAS. — Yejetales sarmentosos y le- ñosos ó especies de bejucos, cuyos tallos larguísimos muy fuertes, mas ó menos ramosos están ordinariamente provistos de aguijones m.uy fuertes, raras veces inermes ; hojas simples alternas cuyas ner- vaduras son anastomasadas, pecioladas y acompañadas por dos zar- cillos muy fuertes que salen de su axila ; otras veces plantas herbá- ceas cuyos tallos como los de los bejucos salen de un rizoma mas ó menos desarrollado. Flores dioicas en especies de umbelas ó cimas axilares cuyo periantio único y monosepalo tiene seis divisiones iguales, profundas y abiertas; en las masculinas hay seis estambres, de anteras introrsas ó vueltas hacia el centro; las femeninas tienen el periantio conforme, pero consistente, conteniendo un pistilo for- mado de un ovario libre y globoso, trilocular, con un huevecillo úni- co en cada celdilla, cuyo vértice lleva tres estilos ó un estilo tripar- tido con sus correspondientes estigmas. El fruto consiste en una baya globosa con tres celdas monospermas ; embrión homótropo in- trario^ Smilax salsajKirilla, L. S. antisifilitica. S. fseiido china. C.T. Y., 386-387. Familia 18. — TILANDSIEAS. — Plantas herbáceas vivaces y casi siempre parásitas sobre los árboles vivos, algunas raras veces terrestres, cuyas hojas simples, estrechas, ensiformes ó con forma de cinta, son sentadas, dispuestas en roseta, del centro de la cual sale un bohordo mas ó menos largo y á veces provisto de algunas hojas mas pequeñas ó escamiformes y alternas ; flores hermafroditas en' espigas 6 panojas terminales formadas de un periantio monófilo, 38 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. cuyas tres divisiones esternas son mas ó menos verdes ó grisáceas, mientras las tres internas son siempre petaloídeas; estambres seis insertos en el tubo perigoneal; pistilo único formado de un ovario trilocular polispermo con la placenta axil, llevando en su vértice un estilo único terminado por un estigma algo trílobo. El fruto consiste en una cápsula linear, oblonga, trilocular, abiicndose por tres ven- tallas y conteniendo en una placenta axil muchas semillas alarga- das y peludas, con el embrión antitropo extrario. Tillanclsia iiS7ieoi- íf^í/T. Rccurxata. C. T. Y., 683. SUB -CLASE II. — IXFEROYAPJEOS. GRUPO 1\ — DICLINES. Familia 19. — DIOSCOREA CEAS. —Plantas vivaces cuyos ta- llos trepadores, semileñosos ó herbáceos muy largos y ramosos, á veces como alados ó desnudos y cilindricos salen ordinariamente de una raiz mas ó menos gruesa, perpendicular, carnosa ó feculenta, especie de rizoma bastantes veces ; hojas simples, alternas, pecio- ladas, frecuentemente acorazonadas, cuyas nervaduras son ramifi- cadas. Flores en racimos ó espiguitas axilares, cuya reunión forma algunas veces panojas terminales, pequeñas y blancuzcas ; constan de un periantio regular con seis divisiones profundas, en las mascu- linas hay seis estambres libres ó comomonadelfos y perijinos, cuyas anteras biloculares son intorsas; las femeninas se componen además del perigonio señalado, de un pistilo único formado de un ovario in- fero trilocular, con uno, dos ó mas huevecillos, ascendentes ó incli- nados en cada celda, y cuyo vértice lleva tres estilos distintos ó un estilo trífido con los correspondientes estigmas. El fruto consiste en una cápsula samariforme ó provista de una ala membranosa que suele faltar bastantes veces con tres celdas conteniendo algunas se, millas membranosas, ó unilocular monosperma por causa de aborto; otras veces es una baya trilocular con dos ó tres semillas globosas que contienen, como las otras, en el interior de un endospermo casi córneo un embrión colocado hacia el hilo. Dioscorea alata, L. D. tuhercvMfera. D. sativa, C. T. Y., 189-190-191. GRUPO 2. — HERMAFRÓDITOS. Familia 20. — IRIDÁCFAS ó IRÍDFAS. — Plantas herbá- ceas vivaces, ordinariamente provistas de un rizoma ó bulbosas, con raices capilares ó fibrosas; hojas sencillas, mas ó menos estrechas, largas y bastantes veces ensiformes, envainadoras por la base, sési- les, radicales ó algunas veces alternas sobre el bohordo, simulando un tallo lejítimo. Flores hermafroditas solitarias en el vértice de un boliordo mas ó menos largo ó en grupos axilares en la parte supe- rior de una especie de tallo algo nudoso, mas ó menos ramoso, ci- lindrico ó comprimido, en donde están como apanojadas ó en espe- cies de cimas pauciñoras ; con mucha frecuencia envueltas antes de MONOCOTILEDÓNEOS. LIRIOIDEAS. 39 la ñoracion en una espata membranosa, delgada y como apergami- nada ó escamosa; tales flores se componen de un periantio tubuloso con seis divisiones profundas, mas ó menos desiguales, irregulares y siempre petaloídeas, en dos series y cuyas tres esternas corres- ponden con los tres estambres insertos en la garganta del perigonio, y cuyos filamentos, á veces soldados con el tubo perigoneal, llevan una antera bastante grande, bilocular estrorsa ó que se abre hacia afuera; pistilo formado de un ovario infero, único, trilocular polis- permo, cuyo vértice lleva un estilo terminado por tres estigmas opuestos á las anteras, petaloideos ó laciniados y huecos. El fruto es una cápsula con tres celdas polispermas y cuya dehiscencia es lo- culícida; las semillas están formadas de un tegumento propio y de un embrión cilindrico y homótropo contenido en un endospermo carnoso ó córneo. Cy^picra Martinicensis . Sisyrinclimm PahnifGlmm. C.T. Y;, 425-316. Familia 21. — AMARILIDÁCEAS ó AMAHILIDEAH. — Plantas herbáceas viváceas, ordinariamente bulbosas: el bulbo sin embargo suele faltar algunas veces. El tallo está casi siempre re- emplazado por un bohordo que alguna vez que otra es muy grande y simula un tallo lejítimo; hojas ordinariamente radicales simples, lanceoladas, mas ó menos largas, dispuestas á manera de roseta, estendidas en el suelo ó derechas, de consistencia blanda ó bastan- te duras y fibrosas, las mas veces envainadoras por la base, alter- nas. Flores hermafroditas dispuestas en cimas terminales ó en cimas ó en grupos laterales á lo largo del bohordo, ordinariamente en- vueltas en una espata membranosa antes de la floración ; se compo- nen de un neriantio tubuloso, monosenalo, con seis divisiones mas ó menos profundas, iguales, equitantes, derechas ó dobladas hacia afuera, algunas veces las tres esteriores son algo mas cortas que las tres interiores, á veces provisto de seis escamitas situadas en la garganta; seis estambres insertos en el tubo perigoneal ó en el fondo del perigonio cuando no es tubuloso, de filamentos libres ó reunidos entre sí por una membrana petaloidea que sale de la garganta, con anteras grandes, biloculares é introrsas; pistilo formado de un ova- rio único ififero con tres celdas que contienen muchos huevecillos y cuyo vértice lleva un estilo simple mas ó menos largo terminado por un estigma sencillo ó trífido. El fruto es una cápsula polisper- ma, trilocular, abriéndose por tres ventallas septíferas, y por con- siguiente de dehiscencia loculícida ; algunas veces es una baya, unilocular por causa do aborto, con tres semillas que presentan, como las de la cápsula frecuentemente una carúncula celulosa y contienen en un endospermo carnoso un embrión cilindrico y ho- mótropo, con la raicilla cerca del hilo no estrofiolado. Análisis dicot''mica de las tridus. 1. Yejetales siempre bulbosos, 2. — Yejetales nunca bulbosos, 3. 2. Sin corona alguna ó de estambres libres. T. I. Amaeileas. Antanllis punicea, L. A. cquestris, L. Crimcm americamun. C. 40 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. T. Y., 287-678-677. — Estambres acompañados de apéndices alter- nando con ellos ó reunidos por una corona petaloídea. T. II. ísar- cfsEAS. Pancratüim Cariheum, L. — C. T. Y., 288-676. 3. Raices fibrosas á yeces con tubérculos feculentos; verticilo esterior diferente del anterior. T. III. Alstroemérieas. Alstroe- meria edulis, Tuss. — Raices fibrosas, nunca tuberculosas ; hojas muy grandes, muy tiesas, muy espesas, fibrosas, con figura de espada, terminadas por una púa muy punzante ; los dos verticilos de la flor conformes; bohordo muy grande. T. lY. Agáveas. Agave a^neri- cana. A. vivípara. A. fétida. A. Cuhensis, L. — C. T. Y., 388. Familia 22. — HlPOXIDUAS. — Plantas herbáceas, vivaces, con una especie de rizoma con raices fibrosas; hojas todas radica- les, sésiles, larguitas y estrechas, envainadoras por la base; fiores siempre hermafroditas dispuestas en especie d^e umbela en la sumi- dad de un bohordito y contenidas en una espata bivalva antes de la floración ; se componen de un periantio monófilo con seis divisiones equitantes, profundas, aguzadas y casi iguales, un poco tubuloso y que lleva los seis estambres insertos en su garganta, de anteras in- trorsas ; pistilo formado de un ovario infero, turbinado, cuyo ápice lleva un estilo simple terminado por un estigma sencillo. Fruto seco, coronado é indehiscente, algunas veces abayado, trilocular polispermo; semilla cuya testa es crustácea y lustrosa, con el em- brión intrario ó interior, cuya raicilla está remota del hilo estro- fiolado. Hypoxis scorzoner (¿folia, L. — C.T.Y., 315. ORDEN ÍII. t Yejetales de periantio doble cuyo interior es siempre petaloídeo. y á veces ambos simulan una corola; endospermo farináceo. SUB-ÓRDEN 1°. Periantio interior solo petaloídeo y simulando una corola. CLASE X. — BROMELÍNEAS. Familia 23. — BROMELIÁCFAS. — Plantas herbáceas viva- ces, terrestres ó falsas parásitas con hojas sencillas alternas, largas, derechas, tiesas, coriáceas, estrechas, puntiagudas y punzantes, con las nervaduras lonjitudinales, cuyos bordes están con mucha fre- cuencia provistos de aguijones muy fuertes, dispuestas ordinaria- ' mente en forma de roseta; frecuentemente estos vejetales están en- teramente cubiertos de bozo blanco; del centro de las hojas mas interiores, que frecuentemente se han vuelto de un primoroso color encarnado, sale un bohordo mas ó menos largo terminado por una pina, una espiga ó una panoja de flores siempre hermafroditas, que se componen de un periantio monosépalo mas ó menos tubuloso, con seis divisiones mas ó menos profundas, cuyas tres esteriores, MONOCOTILEDÓNEOS. CLASE XI. ESCITAMÍNEAS . 41 nunca petaloideas y mas estrechas, simulan un cáliz lejítimo, mien- tras las tres interiores, mas grandes, petaloideas y adornadas con primorosos colores, parecen una corola; hay seis estambres insertos en la garganta perigoneal, cuyos filamentos, nunca petaloideos y li- bres, llevan anteras biloculares é introrsas; pistilo formado de un ovario infero trilocular polispermo, de cuyo vértice sale un estilo simple terminado por tres estigmas planos ó subulados. Fruto tri- locular abayado ó capsular polispermo; bayas sueltas ó muchas sol- dadas entre sí y formando una pilla, las semillas lustrosas, negras, mas ó menos comprimidas, se componen de un endospermo farinoso en cuya parte inferior se aloja esteriormente un embrión prolon- gado y retorcido. Bromelia ananas, L. Malla anthelmintica. R. de G. y. M. laratas, etc. C. T. Y., 513-824. SUB -ORDEN 2. Ambos periantios petaloideos, cuyo esterior algunas veces es glumáceo. CLASE XI. — ESCITAMÍNEAS. Familia 24. — MUSA CB AS. — Yejetales herbáceos vivaces que á veces bastante grandes parecen arljolitos, pero cuyo tron- co bastante grueso , está formado por la reunión de las vainas de las hojas, y de poca consistencia; otras veces es un bohordo que simula un tallo, y que salen ordinariamente uno y otro de un rizoma mas ó menos desarrollado; hojas regulares ó grandí- simas cuvas nervaduras son transversales, limbo enrollado en la prefoliacion, simples, enteras, largamente pecioladas, con la base del peciolo envainadora; son alternas; ñores dispuestas en racimos, en espigas ó en panojas, enderezadas ó inclinadas y hasta colgantes, están envueltas antes de la florescencia en una ó en dos espatas, una de ellas general y la otra parcial, caducas ; tales flores se componen de un periantio monófilo irregular con cinco ó con seis divisiones desiguales, todas petaloideas, dispuestas en dos series, á veces como bilabiado, de tal suerte que, en esa circunstancia, la serie esterna tiene cinco divisiones, mientras que la interna é inferior á la vez presenta solamente una. Estambres cinco á seis de filamentos mas ó menos cortos, libres, con anteras bastante grandes, biloculares é introrsas y ornadas por el vértice de una especie de cresta petaloi- dea; pistilo formado de un ovario infero, cuya forma y tamai5o va- rían bastante, trilocular, polispermo y raras veces monospermo, de cuyo vértice sale un estilo simple terminado por un estigma simple y cóncavo ó formado de tres lóbulos ó de tres lacinias. El fruto es una baya á veces bastante grande y gruesa, mas ó menos carnosa y larga, con tres celdas polispermas ; otras veces consiste en una cápsula trilocular también y polisperma, que se abre por tres ventallas septíferas y cuya dehiscencia es por consiguiente 42 . DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. loculícida. Las semillas están á veces pegadas por medio de un po- dospermo y rodeadas de pelo horizontal, j se componen de un tegu- mento propio crustáceo y de un endospermo que contiene un em- brión prolongado y derecho. Semillas solitarias en las celdas de la cápsula cuya dehiscencia es septicida. T. I. Heliconíeas. Heliconia bijai, L. II. 2}SÍttaxorura, L., etc. G. T. V., 347. — Muchas semillas en cada celdilla del fruto, que es tan pronto carnudo y abayado como capsular, y en ese úl- timo caso de dehiscencia loculicida. T. II. Uraníeas. Mtcsa para- disiaca, L. M. sajnenUnn, L : C. T. V., 193-194-195-198. Familia %h. — ZINJIBERACFA8. — Plantas herbáceas, vi- vaces, provistas ordina.riamente de un rizoma mas ó menos desarro- llado y ramoso, de donde sale un bohordo lejítimo ó talliforme, sen- cillo, desnudo ó mas ó menos provisto de hojas ó de escamas; hojas ordinariamente radicales, simples, enteras, cuyas nervaduras son transversales 3^ el limbo de prefoliacion enrollada, con peciolo mas ó menos largo, separado frecuentemente del limbo por una ligula y de base envainadora. Flores siempre hermafrcditas, dispuestas en especies de mazorcas ó espigas terminales, densas, mas ó menos gruesas, escamosas, ovales ó con figura casi de cono; tales flores, solitarias, mellizas ó en número de tres, salen de la axila de una es- cama grande ó bráctea, libre ó soldada con las vecinas y formando así una especie de involucro, envueltas además cuando muy tiernas, y por consiguiente antes de la floración por una espata membra- nosa muy delgada y blanca, y se componen de un periantio doble, cuyo esterior tiene tres divisiones persistentes que 'parecen un cáliz lejítimo, mientras el interior, formado de 4 ó de 5 divisiones des- iguales reunidas entubo por la base y petaloideas, simula una corola monopétala; un solo estambre fértil de filamento ordinariamente petaloideo que lleva una antera bilocular, cuyas celdas están con frecuencia situadas en sus bordes; filamentos estériles petaloídeos ó abortados; pistilo cuyo ovario infero, trilocular y polispermo, lleva en su vértice un estilo petaloideo con un estigma cóncavo ó con figura de copa. El fruto es una cápsula trilocular que se abre por tres ventallas septiferas cuya placenta es axil ; iriuchas de sus semi- llas tienen un perispermo doble y el embrión esterior, y algunas de ellas están provistas de un arilo, mientras falta en las otras. Zin- giljer officinalis, L. Z. Zerum'bert. Borb. Cúrcuma longa^ L. Kcem- pferia orjtunda.Q. T. V., 182-23-227-126. Familia 26. — CANNACFASó MARANTA CEAS. — Plantas herbáceas vivaces no aromáticas, con rizoma ó tubérculos ; de hojas simples, mas ó menos pecioladas, enteras, enrolladas á manera de cartucho en la prefoliacion, cuya base del pecíolo, mas ó menos largo, es envainadora y con una ligula que separa su vértice de la base del limbo, que suele faltar con bastante frecuencia , radicales ó alternas en un tallo que es una especie de caña mas ó menos ra- mosa y algo nudosa. Flores siempre hermafrcditas dispuestas en espigas mas ó menos flojas ó en panojas formadas las unas y las otras de grupos paucifloros, envueltos antes de la floración en una brác- tea espatiforme que suele faltar bastantes veces; tales flores constan MONOCOTILEDÓNEOS. CLASE XII. — ORQUTOÍDEAS. 43 de un periantio doble cuyo ebterno de tres divisiones giumáceas, delgadas, verdes, membranosas ó coriáceas, reemplaza el cáliz lejí- timo, mientras el interior, petaloídeo, de 4 á 6 divisiones desigua- les, mas ó menos tubuloso, representa la corola ; un estambre único cuyo filamento, mas ó menos petaloídeo, tiene una antera unilocular situada por su borde; pistilo formado de un ovario infero trilocular polispermo de cuyo vértice sale un estilo petaloideo á veces unido con el filamento y de estigma lateral. El fruto es una cápsula trilo- cular ó bilocular por causa de aborto, y entonces con una sola se- milla; las semillas no tienen nunca arilo y se componen de un en- dospermo farinoso simple y de un embrión cilindrico, liomotropo y alojado en él; placentacion axil. Análisis dicotómica de las varias tribus. 1. Yejetales rizocarpios ó provistos de un rizoma cuya inflores- cencia terminal es flojamente apanojada, racimosa ó espigada, T. I. Globeas. Glc'hda uvíformis, L. — Yejetales nunca jamas rizocar- pios, 2. 2. Pero con raices tuberosas, amanojadas ó frecuentemente ras- treras, leñosas y cuya inflorescencia, por lo común radical, espigada ó terminal, está densamente provista debrácteas. T. 11. ÍLmomeas. Maranta aritndinacea. C. T. Y., 198. — Yejetales de raices nunca jamas tuberosas pero siempre fibrosas, 3. 3. Inflorescencia terminal ocupando el vértice del tallo ó del bo- hordo y con frecuencia flojamente apanojada ó racimxosa. T. III. Alpi^^ieas. Alpinia S2ncata, L. — C. T. Y., 225. — Yaina de las liojas tubulosa; inflorescencia terminal-densamente espigada. T. lY. Costeas. Costiis svicatus, Sw. C. T. Y., 225-311. CLASE XII. — ORQÜIOÍDEAS. Familia 27 .— ORQ UIDEA S A ORQ UIDEA CEA S. — Yej eta- les herbáceos, raras veces fructicosos, pero siempre vivaces, ter- restres ó epífitos y entonces seudo-parásitas; de raices fibrosas, fa- ciculadas ó amanojadas, con ó sin tubérculos cuando son terrestres, siempre fibrosas, mucho mas gruesas, mas fuertes y larguísimas cuando epífitos, y formando una especie de redecilla que tiene en- vueltas las ramas de los árboles sobre los cuales viven. Los tubér- culos en las clases que les tienen son en número de dos ovoideos ó casi globosos y otras veces mas ó menos comprimidos y palmeados, el uno, que es del año anterior, se gasta para suministrar á la veje- tacion principiante del vejetal y sin duda también á la formación del otro que ha de tener igual papel el año venidero y reemplazar al otro que ya no sirve y se ha arrugado ; y las raices lejítimas salen un poco mas arriba que ellos. En esa familia el tallo es muy variado y con mucha frecuencia está reemplazado por un bohordo : en laS especies terrestres hay un rizoma muy corto de donde sale todos 44 DIVISIÓN SEGUNDA. FÁNERÓ(tA.MOS. los años un tallo herbáceo, con un número variable de hojas modi- ficadas y alternas, especie de bohordo cuyas hojas están algunas veces reemplazadas por brácteas, terminándose siempre por una es- piga ó un racimo de flores; las especies trepadoras tienen un tallo verde carnoso, ordinariamente cilindrico y larguísimo, general- mente simple y pocas veces ramoso, provisto de hojas alternas bas- tante dobles V hasta carnosas ; echa bastantes veces raices abventi- vas larguísimas y muy fuertes. Muchas epífitas están provistas de un tallo lejítimo ordinariamente poco largo, como de media vara y raras veces mas, con hojas alternas y dísticas ; en fin la mayor parte de las seudoparásitas tienen en lugar de tallo un seudo-bulbo, especie de rizoma aéreo y superficial, mas ó menos grueso, mas ó menos largo, algunas veces lo hemos hallado hasta como de una vara, pero ordinariamente no pasa de 2" hasta 8'" á 10", según las clases, generalmente ovoideo, fusiforme, comprimido y acorazonado ó no, de sección transversal cilindrica, ovoidea, oval, elíptica ó an- gulosa, pero siempre la misma en los mismos géneros, terminado por hojas en número variando de 1 hasta 10, pero constante para cada especie. Hojas siempre simples, blandas ó coriáceas, á veces bastante dobles y hasta carnudas, otras veces graminoideas, alter- nas ó dísticas en el vértice del seudo-bulbo, aunque sus vainas per- sistentes, que se han vuelto una membrana blanca muy delgada, salgan alternas de las especies de zonas que existen en la superficie de los seudo-vbulbos; las especies terrestres las tienen con frecuen- cia radicales: tales hojas tienen siempre todas las nervaduras lon- jitudinales y no ramificadas . su tamaño varia mucho, pero no es así de su figura; en efecto, en general son mas ó menos ovales, oval-lanceoladas ó lanceoladas, otras veces casi redondas ó elípti- cas ; en algunas especies, particularmente en las trepadoras, el lim- bo está como articulado en el v^.rtice de la vaina de la cual se des- prende : hemos observado en algunas seudo-bulbosas hojas articula- das de un modo muy particular; en efecto, las tres nervaduras principales se separan hacia el vértice de la vaina, de suerte que la parte de ellas que queda presenta tres espinas, siendo la mediana mayor que las otras dos, que son laterales, de manera que la parte superior de la vaina que correspondía al limbo separado presenta una superficie oblicuamente cortada que corresponde con otra que se halla también en la base del limbo, pero en la cara opuesta forman- do cada una la mitad del espesor de la hoja en ese lugar y también con tres espinas, este último está un poco mas hondo, las costillas se han separado pues oblicuamente, según su diámetro transversal y algo lonjitudinal á la vez y constitución así las espinas ; es una ar- ticulación escamosa. En tal circunstancia, desprendidas las hojas, el vértice del seudo-bulbo está armado de púas fuertes y muy pun- zantes. Las flores de las orquídeas son muy interesantes tanto por su hermosura, que proviene de sus caprichosas y maravillosas formas, como por los hermosos colores que las adornan y por su tamaño; son solitarias en el vértice de un pedúnculo que sale del rizoma ó del seudo-bulbo, otras veces de la axila de una de las escamas mas ó MONOCOTILEDÓNEOS. CLASE XII. ORQUIOÍDEAS- 45 menos graneles, mas ó menos foliáceas que acompañan á la base de ese órgano, pero las mas veces están en espigas, racimos ó primo- rosas panojas aguirnaldadas, mas ó menos furnidas : á veces largas de mas de una vara, cuyos grupos ó racimitos que las forman están dispuebtos en espiral ó algunas otras veces dísticos, así es también la disposición de las flores sobre los ejes que las sostienen j salen siempre de la axila de una bráctea mas ó menos grande, mas ó me- nos membranosa y á veces espatiforme ; son sésiles ó cortamente pedunculadas; ordinariamente antes de abrirse la flor, su ovario, que se hallaba recto, se tuerce según el eje lonjitudinal ficticio que pasa por su centro de tal manera que la posición relativa de las va- rias partes de la flor abierta con el eje que la sostiene se halla ente- ramente intervertida, volviéndose inferiores las partes que al prin- cipio eran superiores y vice-A^ersa ; se componen de un periantio acibérente con el ovario sentado que, situado por su vértice, se parte en seis divisiones, siendo las tres inferiores semejantes ó conformes entre sí ; generalmente las tres primeras y dos de las segundas se enderezan por encima del eje de la inflorescencia, la sesta, al con- trario, se vuelve hacia abajo y de esa manera el periantio se hace como bilabiado, cuyo labio superior está formado por cinco divisio- nes afectando bastantes veces la forma de un yelmo, á veces por tres solamente, dos quedándose estendidas, laterales y simulando así co- mo unas alas, mientras la inferior, llamada labelo, que al principio se hallaba en la parte superior, constituye el otro labio: esa última principalmente por sus formas caprichosas, su tamaño á veces muy grande y sus primorosos colores da á esas flores el aspecto tan pronto de una mariposa ó de un insecto, como de otro objeto natu- ral; la base del labelo entero, las mas veces trilobado, derecho ó doblado hacia abajo, convexo ó cóncavo y de circunferencia ondu- losa, etc., es bastantes veces callosa ó abrazadora, otras veces tiene un hueco que alguna vez que otra se va prolongando en espolón mas ó menos larü'o : las divisiones esteriores se sueldan á veces entre sí, otras veces la mas superior se suelda sola con las dos laterales de la serie interna, en fin esa soldadura se hace alguna vez que otra con la columna ó ginostemo, que resulta de la reunión de los órganos reproductores de ambos sexos sale del vértice del ovario y se eleva en el centro de la flor, corta y trunca oblicuamente, de manera que la superficie plana ó lijeramente cóncava que la termina mire hacia afuera; tal superficie, cubierta de una sustancia viscosa, no es sino el estigma. Los estambre's son tres, opuestos á las divisiones perigo- nales esteriores^ pero rarísimas veces se les halla, y dos solamente son perfectos, el tercero mas superior estando estéril, y casi siem- pre hay uno solo que es el superior, mientras los otros dos abortos están representados en el fondo de la flor ó hacia la base del ginos- temo por dos tuberculitos y corresponden á las divisiones laterales de la serie perigonial interna. La antera se inserta sobre el estigma mismo, sea un poco mas abajo quedándose paralela con él, sea un poco mas arriba, y toda su lonjitud pasa mas allá que él, y en esa circunstancia se la dice terminal, otras veces está enderezada ó re- costada sobre la superficie estigmática ; tiene una ó dos celdillas. 45 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. otras veces cuatro y hasta ocho, sentada ó estipitacla á causa de un piquito que se halla en el vértice de la columna, conteniendo un polen cuyos granitos están mas ó menos agrupados j aglomerados ligados flojamente entre sí por otra sustancia, y siempre separables los unos de los otros; cuando esos granitos están agrupados por cua- tro, formando así grupitos mu}^ numerosos que forman dos ó á veces cuatro masas polínicas bastante grandes, fácilmente separables, se llama pulverulento; tales grupitos de granitos con forma de cuña están unidos á un eje elástico, llamado retinado, por un hililo tam- bién elástico que es la caudícula ó colita, de manera que apartando los unos de los otros con suavidad forman como una especie de raci- mo ; por último los granitos polínicos están aglutinados á manera de un tejido sólido, compacto, con aspecto y consistencia de cera y pareciendo como una masa de tejido celular muy fino : es el polen llamado ceráceo. En esos varios casos está contenido en las dos, cuatro ú ocho celdillas membranosas de la antera y formando tan- tas masas polínicas, llamadas polinias, como celdillas hay ; las poli- nias son libres ú ordinariamente pegadas á una glandulita estigmá- tica , sea inmediatamente , sea , por lo regular, á favor de la caudícula. La parte de la columna que mira hacia el labelo está for- mada por el estilo, soldado y confundido con el filamento estaminal, y la superficie pegadiza que ocupa su estremo y que bastantes veces representa una boquita que comunica con el canal que se halla al interior de la columna que recorre lonjitudinalmente y abre en el ovario, constituye el estiírma trílobo, cu vos lóbulos mas ó menos confluyentes, y por consiguiente muy poco visibles, son en algunos muy distintos, y á veces dos de ellos parecen provistos de un estilo muy largo ; tal boca se halla á la sazón de la fecundación llena de un líquido viscoso bastante abundante que coje los granitos ó masas polínicas al desprenderse de la antera que á veces se separa de él, pero que con mayor frecuencia se queda en su lugar hasta después de verificada la fecundación; ovario infero siempre torcido, mas ó menos largo y ordinariamente claviforme ó con figura de maza, mas ó menos anguloso ó á veces triangular, unilocular, cuyas tres pla- centas parietales, bífidas, prolongadas y lonjitudinales están opues- tas á las divisiones internas del periantio y cargan con un sin nú- mero de huevecillos. El fruto es una cápsula mas ó menos gruesa, mas ó menos larga y cuya figura es ordinariamente fusiforme y ovoidea á la vez, marcada de tres ángulos mas ó menos pronuncia- dos, unilocular y conteniendo muchísimas semillitas muy finitas pe- gadas á lo largo de las placentas persistentes correspondiendo á los tres ángulos señalados saliendo del pedúnculo y terminándose á la base del periantio, mientras las ventallas intermedias se desprenden y caen, su casco ó testa, flojo y reticulado, contiene un embrión carnudo, sólido y sin endospermo; raras veces como leñoso é inde- hiscente ; bastantes veces de pericarpio harto espeso y como car- nudo, pero que acaba por volverse seco. Tal cápsula se abre por tres ventallas que se separan, los ángulos que llevan las placentas que- dándose reunidas y conservando así, durante bastante tiempo, la forma del fruto ; á veces el podospermo de las semillas está bastante MOXOCOTILEDüNEOS. CLASE XII. — OEQUIOÍDEAS. 47 desarrollado Y carnoso, lo que lia engañado á algunos observadores, de manera que han diclio j hasta escrito que algunas veces la cáp- sula délas orquídeas contenia pulpa. Análisis dicotómica de las triliis y tamhioi de las sul-trihus. 1. Dos estambres fértiles laterales mientras el superior abortado está reemplazado por un apéndice nectariforme ; polen granuloso volviéndose por fin una sustancia como pultácea ; estilo semi-libre ; estigma partido en tres areolas opuestas á los estambres ; plantas herbáceas terrestres. T. I. Cipripedíeas. Cy2)ri])edium, L. — Un solo estambre fértil, 2. 2. Polinias ó masas polínicas ceráceas ó que parecen como cera, en número definido ó indefinido , 3. — Polen pulverulento ó aglo- merado en lobulitos elásticamente coherentes, 29. 3. Polinias en número definido siempre, 4. — Polinias nunca en número definido pero muchísimas, 21. 4. Sin tejido celular superfiuo é intermedio alguno ; antera ter- minal opercular. Plantas epífitas ó terrestres herbáceas , estando con mucha frecuencia espesada la base de las hojas ó de los tallos. T. II. Malaxídeas, 5. — Reunidas por un tejido celular interme- dio que á veces falta, pero entonces lo son por las colitas, 10. 5. Columna derecha, muy poco prolongada por la base, 6. — Co- lumna recostada sobre el ovario, y mas prolongada por la base, 9. ., 6. Polinias dos. S.-T. I. Pleqkotalideas. .P?ei'roi(7¿í?7/¿5 trian- gularis, Pi. Br. Pl. sagittifera, H. B. K. — Tvias de dos polinias, 7. 7. Polinias cuatro, 8. — Polinias ocho. S.-T. II. Nefelafíleas. NiplielapliyUím . 8. Sea colaterales sea sobrepuestas ó dispuestas de tal cual ma- nera. S.-T. III. Lipaeídeas. Ziparis, Rich., Mcilaxis, Swtz. 9. Polinias cuatro, por pares colaterales ó no : antera bilccular; labelo articulado con el pié de la columna ó cenado, sentado ó un- guiculado, entero ó lobado. S.-T. IV. DEXDPtOBiEAS. Bend.rolium, Sw. — IS'o por pares dispuestas, globosas, libres ó un poco adherentes con el piquito ó glándula del estigma; antera bilabiada, bilocular, abriéndose por tres ventallas. S.-T. V. Corallorizideas. Corallo- Tliiza, Hall. 10. Agutinadas al abrirse las flores con una colita y á la vez üe- gadas con la glándula estigmática, 11. — iSo aglutinadas al abrirse las flores, pero reunidas por una membrana celulosa coherente por medio de colitas pulverulentas y las mas veces redobladas, 25. 11. Antera terminal, raras veces dorsal, opercular. Plantas her- báceas epífitas ó terrestres, las primeras con un seudo-bulbo pro- visto de pocas hojas, las otras caulecentes. T. III. Vaxdeas, 12. . 12. Polinias dos, enteras, asurcadas ó profundamente bilobas, á veces son cuatro, 13. 13. Flores provistas de espolón, cuernecillos ó de un saquito, si- tuados por la base del labelo que alargan mas ó menos, 14. — Flores sin espolón ni saquito en la base del labelo, 15. 48 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEEÓGA.MOS. 14. Polinias dos siempre mas ó menos partidas; labelo con espo- lón; antera bilocular. S.-T. I. Sarcantídeas. Angrosciom, Thus. — Labelo libre sentado ó sub-sentado ó algo cenado con la columna, con un saquito ó un espoloncito; antera unilocular. Polinias dos posteriormente asurcadas ó escarbadas. S.-T. II. Inopsídeas. Ino^- sis, H. R. Rodriguera. 15. Labelo libre sentado ó alefo sentadito, 16. — Labelo libre, pero articulado, con la base prolongada de la columna, otras veces largamente unguiculado, 20. 16. Columna sin alas, ni orejitas ó petaloidea, 17. — Columna con alas orejitas ó cuyo vértice está provisto de cerdas, 19. 17. Siempre desnuda y áptera, sin ser nunca petaloidea, 18. — Siempre petaloidea. S.-T. III. Pachifileas. Pachy2)hyllimi. 18. Columna aguzada, hendidura del estigma vertical; antera dorsal unilocular; polinias dos enteras; glándula diminuta ; labelo calloso por en medio, cenado con las dos divisiones perigoniales la- terales. S.-T. IV. NoTiLiDEAS. Notylia, Lndl. 19. Columna alada ú orejada con la cual está continuo el labelo tuberculoso ó crestado por la base : antera unilocular ó semi-bilocu- lar, con ó sin piquito ó róstela ; polinias dos posteriormente asurca- das ; colitas mas ó menos cortas; glándula espesa ú oblonga. S.-T. V.Brasideas. 0)icicliiim^^\viz. — Columna condes cerdas porel vér- tice, derecha y libre ; antera sub-bilocular anteriormente tronca ; polinias dos, posteriormente bilobadas ó asurcadas ; colita máxima, glándula cra-tilajinosa sub-cuadrada. S. T. VI. Catasetídeas. Ca- tasetum macvJatum, H. B. K. Cyrtopodium ghitiniferum , Br, C. Ada?isonii. C. picntaficm, Wild. C. T. V., 421. 20. Polinias ordinariamente dos, pero algunas veces cuatro cola- terales ó incumbentes la una sobre la otra y como apareadas ; pe- riantio connivente ó abierto ; columna áptera. S.-T. VIL Maxila- rideas. Maxilaria. 21. Sin glándula diáfana ninguna; antera terminal opercular, yerbas epiíitas ordinariamente y con seudo-bulbo , algunas veces terrestres y provistas de un tallo lejítimo, rara vez con raices loba- das ó carnosas. T. IV. Epidendreas, 22. 22. Polinias cuatro, 23. — Polinias ocho, 24. 23. Labelo mas ó menos trabado, con las márjenes de la columna ó libre de ellas, con ó sin espolón ; antera bi ó cuadrilocuiar ó sola- mente cuadri docular. S.-T. I. Leliadeas. E]}idendrum, CaUlcya moyses,l^Tiá\. — Labelo siempre libre sin espolón ninguno, unguicu- lado , articulado con la columna, adornado con dos cuernecillos , antera siempre cuadri-locular, S.-T. II. Isochilideas. IsocJiyliis, R. Br. 24. Labelo con ó sin espolón, que está reemplazado por un saquito ó por nada, sentado ó unguiculado ; antera dos, cuatro, seis, ocho locular. S.-T. III. Bletideas. Bletia verecunda, R. P. : C. T. V., 133. 25. Polinias reunidas por un eje aracnoideo elástico que las tiene atadas con la glándula estigmática ; antera terminal erguida ó vol- teada, persistente del todo y de celdillas completas. Plantas herbá- ceas siempre terrestres, con hojas suculentas planas, cuyas radicales MONOCOTILEDÓNEOS. CLASE XII. ORQUIOÍDEAS. 49 son siempre mayores que las demás, volviéndose gradualmente en- vainadoras y caulinares y por fin transformándose en bnlcteas Flo- res ordinariamente con figura de yelmo. T. V. Ofrídeas, 26. — Polinias aglomeraditas en lobulitos por medio de una materia elás- tica, 34. 26. Celdillas de la antera contiguas y paralelas, cuya base no es nunca alargada ni divaricada tampoco, 27. — Celdillas de la antera separaditas y di verj entes por la base , con frecuencia prolon- gada, 28. 2*7 . Glándulas encerradas en el cartucho simple ó doble de la es- tigma con ó sin espolón, las cinco divisiones superiores del perian- tio ordinariamente formando yelmo. S.-T. I. Serapiadeaf, OrcMs. Lm.Sera^ñas, L. — Glándulas enteramente desnudas ó semi desnudas, divisiones superiores del periantio dispuestas á manera de yelmo, base de las anteras trunca ó dilatada en un cartucho falso. S.-T. II. Gi.mnadenideas. Gymnadenia, R. Br. 28. Glándulas encerradas en los cartuchos del estigma, los cuales están desnudos, mas ó menos diminutos, con una ó con dos ventallas ó cubiertas por el lóbulo valvar de la antera; labelo con espolón in- fundibular ó avejigado. S.-T. III.HoLOTRíCHiDEAS.^(9Z(yíria7,Rich. — Glándulas enteramente desnudas, labelo libre ó mas ó menos adnado con las márj enes de la columna ó con ella misma, otras veces conni- vente con los pétalos, con ó sin espolón, sentado ó unguiculado; an- tera erguida, volteada ú horizontal, sentada ó estipitada: S.-T. IV. Satiriadeas. Satyrium, Swtz. 29. Antera terminal opercular persistente ó decidua. Plantas her- báceas las mas veces terrestres, algunas epífitas, de aspecto y de semblante muy variado; unas son afilas y parásitas sobre las raices de ciertas clases de vejetales, rojizas y parecen orobanches; de hojas membranosas y graminoideas, á veces reticuladas, otras veces pil- cadas, alguna que otra vez carnosas, rarísimamente duras, despro- vistas de vaina y articuladas con el tallo ; flores casi siempre mem- branosas, grandes y primorosas, raras veces pequefíitasy herbáceas. T. VI. Aretuseas, 30. 30. Polen sectil, con lobulitos elásticamente coherentes ; estigma situado hacia la base de la columna. S.T-. I. Gastrodieas. Gastro- dia. — Polen granuloso ó pulverulento ; estigma situado hacia el vér- tice de la columna. vS.-T. II. Euaretuseas, 31. 31. Dos polinias solaviente, 32. — Polinias cuatro ú ocho, 33. 32. No asurcadas por la base y enteras; periantio con figura de yelmaó no, labelo espolonado y de limbo articulado. S.-T. III. Limo- DORiDEAS. Eiñpadis, iemW. .Limodorum, Tuss. — Asurcadas por Ja base ; labelo sin callos, pero con laminitas, crestitas ó vello, mas ó menos sentado; antera estipitada bilocular. S.-T. IV. Pogonideas. Pogonia, Juss. 33. Polinias cuatro comprimidas ; de base plícada por atrás ; an- tera terminal persistente, de celdillas aproximadas, semi-cuadrilo- cular; yerbas terrestres. S.-T. V. Epistefieas. EinUc^liyinn. — Po- linias ocho ó cuatro bipartidas; labelo con dos callos por la base ; TOMO II 4 50 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. antera terminal recostada, bilocular.S.-T. YI. Aciantíde.a.s. Acian- tlius. R. Br. 34. Estigma las mas veces prolongado en piquito ó róstela fiscile; antera dorsal persistente j casi paralela con el estigma ó con la cara de la columna ; yerbas todas terrestres con raices amanojadas, algu- nas raras veces y casualmente epífitas; unas especies afilas son pa- rásitas sobre las raices de otros vejetales y rojizas; de hojas mem- branosas, ensiformes ó pecicladas, mas á menudo envainadoras, raras veces duras, pilcadas ó arundináceas ; flores espigadas, rara- mente apanojadas, y con frecuencia provistas de vello glanduloso, la mayor parte pequeñas y semi-herbáceas. T. YII. Neottíeas, 35. 35.' Columna petaloídea ó adornada con apéndices petaloídeos ; labelo diforme bicarinado por la base : antera mútica de celdillas aproximadas ; polinias dos, bilobas. S.-T. I. Diueídeas. Diuris, Smitli. — Columna nunca petaloídea y siempre áptera, algunas ra- ras veces con apéndices por la base, 36. 36. Derecha carnosa y cilindrica, entera ó bifida, — 37. Prolongada en especie de pié, no derecha, carnosa y cilindrica; labelo diforme anterior, paralelo con la columna, acanalado á veces con un espo- lón escondido por debajo de las bases de los sépalos. S. T, II. Espi- ránthideas. S¡úranthes, Rich. Stenorhynclius. 37. Siempre bifida, mas ó menos carnosa, cilindrica; labelo con- forme por la dirección y forma de las demás divisiones perigonia- les petaloídeas. S.-T. líl. Telimítrideas. Tlielymitra, Forst. — De ápice entero ó indiviso, labelo siempre diforme, 38. 38. Labelo siempre sin espolón posterior ó anterior, 39. — Labelo anterior con espolón ó sin él, y entonces las mas veces ventricoso, otras veces cóncavo ó plano por la base; espolón un poco mas largo que los pétalos ; flores boquiabiertas; polinias ocho, dos ó cuatro. S.-T. lY. Tisueídeas. Plexaure, Endl. 39. Labelo posterior cóncavo recostado sobre la columna enana ó alargadiía que tiene escondida ; sépalos ó divisiones esteriores perigoniales al3Íertas ó revolutas; róstela trunca ; rarísima vez se halla la columna bipartida. S.-T. Y. Cranichideas. CranicMs, Swtz. — Labelo anterior y estendido ; sépalos ó divisiones esteriores perigoniales estendidas ó reflejas, alguna rara vez volviéndose como barba. S.-T. YI. Listerideas. Lísteria, K. Br. Familia 28. — VANILLACEAS. — Plantas viváceas sarmen- tosas que trepan por encima de los árboles y demás vejetales; y á primera vista parecen parásitas, pero no lo son puesto que tienen sus raices en el suelo, y sus tallos larguísimos y ramosísimos casi herbáceos y carnosos, contienen una savia como mucilajinosa aveces muy acre y conteniendo muchas agujitas muy finas ó prismas blan- cos y sedosos ; separadas accidentalmente de la raiz echan raices adventivas muy largas, cilindricas, bastante fuertes, de un color blanco sucio algo amarillento, que se van alargando hasta haber alcanzado el suelo, donde penetran y echan raices; mas ó menos ci- lindricos ó elípticos, con cuatro ó cinco surcos verticales opuestos ; provistos de especies de zarcillos opuestos á las hojas, ó sin ellos cuando no son trepadores; con hojas sencillas, sentadas, bastante IVIONOCOTILEDÓNEOS. CLASE XII. — ORQOOÍDEAS. 51 dobles, ovales y alternas, sin vaina, articuladas con el tallo, mas veces reticuladas, lampiñas, duras y pilcadas ; ñores siempre her- mafroditas y ginandras, dispuestas en racimos ó en espigas axilares y formadas de un periantio monofilo con seis divisiones desiguales y de las cuales la inferior ó labelo es cóncava en forma de capuz y con su limbo dilatado en lámina, undoso por los bordes, conado ó no con la columna, con ó sin barba ó pelo hacia la base. Antera terminal opercular en el género vainilla, polinias dos bilobuladas y granulosas, pero ordinariamente el polen es pulverulento, granuloso ó en masa pulposa, concreto ; estigma situado hacia el vértice de la columna ; todas las divisiones perigoniales son petaloídeas y bas- tante grandes, subiguales conformes y libres por la base. El fruto es una cápsula siliciforme, indehiscente, mas ó menos larga, mas ó menos delgada, unilocular, con muchísimas semillas insertas en tres placentas parietales, por medio de un podospermo carnoso bas- tante desarrollado y formando una especie de arilo que envuelve la base de la semillita cuyo embrión cilindrico y homótropo está alo- jado en un endospermo farinoso; el podospermo ha sido conside- rado, por equivocación, como pulpa, y constituye la parte aromá- tica de la vainilla del comercio. 1. Flores en espiga axilar pauciflora y color carmesí, hojas ao- vado-oblongas, con las nervaduras bien visibles y bastante pronun- ciadas, sépalos ondulosos, labelo puntiagudo, cápsula cilindrácea, delgada, muy larga, no aromática: ella no produce pues la vainilla del comercio, y su nombre proviene sin duda de una equivocación y por haber confundido las especies. Vanilla aromaticen, L. — C. T. V. 228. — Flores en espiga ó en racimito axilar pauciíloro y nunca color carmesí, pero mas ó menos blancas ó amarillentas. 2. Cápsula con olor aromático y constituyendo la vainilla del co- mercio, 3. — Cápsula sin olor ó con un olor apenas pronunciado, 4. 3. Hojas oblongodanceoladas, planas, finamente estriadas, flores de color verde amarillento, con el labelo amarillo pálido por la cara superior y remellado ; tallo muy largo, del tamaño del dedo meñi- que y muy ramoso, con hojas puntiagudas, cortamente pecioladas, de un color verde mar, bastante distantes y largas de 5-9" ; espigas enderezadas, bastante densas ó furnidas, sub-sesiles y multiflores, racemitbrmes y cuyo raquis, casi tan grueso como el tallo, es largo de como 6'; brácteas pequeñas y verdes ; sépalos lustrosos, lanceo- lado-oblongos , sub-ol3tusos y cuyos estirones son largos de como 15", mientras los interiores están algo mas cortos y sin embargo un poco mas largos que el labelo, cuyo limbo desplegado es reflejo y pubescente interiormente; ginostemo cóncavo y pubescente ante- riormente. V. plaiiifoíia, Hort. Kew. Myrodromafi'agrans. Salisb. C. T. Y. 228 se cria muy bien en las Antillas y suministra la vai- nilla del comercio. — Hojas elípticas oblongas, aguzadas; flores blanquecinas, con los sépalos revueltos por el ápice; labelo punti- agudo; cápsula triedra ó trilateral; tallo muy ramoso del tamaño del dedo meñique y largo de 30-40\ con frecuencia colgante de los árboles y pasando de unos á otros; con hojas sésiles y mas grandes que los entrenudos, largas de 6-8" y anchas de 3", de un color 52 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. verde oscuro ; pedúnculos con 5-15 flores saliendo de la axila y cuyos sépalos esteriores, lanceolados, sub-aguzadosy un poco ondulo- sos, son largos de 2 1/2-3", mientras los laterales son conformes ó mas estrechos y mas ondulosos; labelo mas corto que los sépalos, con el limbo aovado y algo rizado por los bordes; ginostemo lam- piño, de ápice algo espesito ; antera cortamente bicorne por el ápi- ce ; cápsula larga de 6-8" derecho ó sub-falciforme, delgada, de un color pardo moreno cuando madura; muy aromática. V. Quianensis, Splitgerber. Se halla en el comercio. C. T. Y., 228. 4. Flores blancas con los bordes del limbo de las divisiones mo- rados, tallos como de cuatro caras convexas, separados por surcos lonjitudinales bastante hondos, que contienen muchos cristalitos blancos, hojas largas como de 8" á 10" y anchas como de 3"; flores en racimos axilares, situados hacia la sumidad de los tallos cu^^o ra- quis parece como articulado, llevando cada articulación una flor de pedúnculo cortito, derecho y saliendo de la axila de una bráctea ; fruto del tamaño del dedo meñique y largo como de 5", maduro huele un poco á vainilla. F. inodora. C. T. Y., 825. — Flores entera- mente blancas; tallos con unas cinco caras pronunciadas y con- vexas, separadas por surcos que les dan un aspecto como acanala- dito; hojas largas como de 2" á 3", lanceoladas, acuminadas, recorvadas hacia el vértice y de bordes algo membranosos ; flores grandes casi sentadas y dispuestas en espiga axilar, cuyo eje es es- peso y flexuoso; labelo con pelo, pestañoso, asurcado, cuyos bordes son ondulosos y la punta enrollada y obtusa; frutos bastante lar- gos, oblongos y de base cónica y lisa, sin olor alguno. V. clavicu- lata. CLASE XIII. -^ FLÜYIALES. SUB-CLASE 1^ — EXALBUMINADOS Y ASPADICIFLOROS. Familia \\ — PÓTAME AS ó NÁYADE AS. — Plantas her- báceas que se crian siempre en las aguas dulces de los rios ó de las lagunas en donde viven mas ó menos sumerjidas, cuyos tallos, mas ó menos delgados y hasta filiformes, bastante largos de ramos cilin- dricos ó comprimidos, llevan hojas simples, opuestas ó alternas, sentadas ó mas ó menos pecioladas, enteras y de bordes ondulosos ó como rizados. Flores hermafroditas ó monoicas, apétalas ó desnu- das, dispuestas en espigas ó espádices que salen fuera del agua para que se verifique la fecundación ó que se quedan siempre sumerjidas, y se componen de un periantio con cuatro sépalos ó enteramente nulo ; de cuatro ó seis estambres insertos sobre una especie de re- ceptáculo ó de brazo, é hipojinos con el polen globoso ; de un pistilo formado de cuatro ovarios libres y distintos con un solo huevecillo, cada uno con su estigma correspondiente y las mas veces sentado. Frutos aqueniformes, cuya semilla sin endospermo tiene un embrión homótropo y macropodo. Potamogetón. Tallo cilindrico prolífero con hojas papiráceas largamente pecioladas oblongas, ó lancelado-oblongas, aguzadas por la base y cuyo peciolo es convexo por el vértice, las submersas per- MONOCOTILEDÓNEOS. — CLASE XIII. — FLUVIALES. 53 sistentes y mas estrechas son alternas ; estípulas libres no aquila- das ; espigas cilindricas cuyo pedúnculo es tan grueso como ellas; aquenios aquilados. P. Jiuüans, Rth. — Tallo cilindrico ramoso, con hojas membranosas cortamente pecioladas, lanceolado-oblongas ú ovales cuando superiores; estípulas libres y nunca aquiladas; espigas cilindricas con los pedúnculos tan gruesos como ellas; aque- nios apenas aquiladitos. P. plaiitaginea, Dr. Yar. Jamacensis. Familia 30. — ALISMACEAS. — Plantas herbáceas, que se crian en los lugares húmedos, de hojas simples, pecioladas, de base envainadora, á veces dispuestas en roseta, ovales, lanceoladas (3 asaetadas, ordinariamente radicales, alternas y saliendo de una es- pecie de rizoma. Flores hermafroditas ó monoicas dispuestas en es- pigas ó en panojas terminales sostenidas por un bohordo mas ó me- nos corto y que á veces está provisto de algunas hojas y simula un tallo; constan de un periantio con seis divisiones de las cuales las tres interiores son mayores y petaloideas, mientras que las tres es- teriores, mas pequeñas, son verduzcas; estambres de seis á veinte y hasta 30; en las femininas muchos pistilos agrupados en cabecita ocupan el centro de la flor, son formados de un ovario, sea libre sea soldado con los que están á su lado, unilocular con uno ó algunos huevecillos, derechos ó inclinados y adheridos en su lado interno, cuyo vértice lleva un estigma á veces sentado; fruto seco capsular, unilocular, mono ó polispermo, indehiscente ó cuya dehiscencia se hace por su lado interno y reunidos muchos como en cabeza sobre una especie de receptáculo mas ó menos desarrollado y mas ó menos cónico; las semillas son ascendentes ó inversas y compuestas de un tegmento propio que cubre inmediatamente un embrión grueso de- recho ó encorvado á manera de herradura. Perigonio con las divisiones internas v esternas conformes, de limbo abortado ó nulo; anteras estrorsas; huevecillos solitarios ó apareados, colaterales y anátropos; embrión recto. T. I. Juncagí- neas. — Perigonio de divisiones internas petaloideas, mayores y cuyo limbo es nervioso; anteras introrsas en las flores hermafrodi- tos; huevecillos solitarios ó apareados, sobrepuestos y campilotropos ; embrión aí?arabatado , T. II. xÍlismeas. ú:.\. F chino clorus cordi- folius, Gr.'C. T. V. 17. G. II. Sagittaria. Hojas asaetadas, conlasnervadurasinferioresre- corvadas, depeciolo blandoy como esponjosopordentro ; bohordo como de unas 6"á 8", blando y como esponjoso interiormente, con los ver- ticilos de flores distantes , cuyos pedicelos son casi iguales; filamen- tos de los estambres mas largos que las anteras ; capsulitas corta- mente mucronadas; enteramente ceñidas por una ala. /S'. aciUifoUa, L.: C. T.V., 15. — Hojas ovales bastante grandes y largamente pe- cioladas, tiesas duritas y fuertes, de base un poco escurrida tan pronto oval-oblongas como elíptico-lanceoladas, con todas las nervaduras as- cendentes; bohordo muy largo, fuerte, tieso y bastante duro; verti- cilos de las flores paucifloros y distantes; pedicelos de los mas supe- riores mas cortos; anteras mas largas que los filamentos; capsulitas mucronadas provistas de una alita dorsal y esponjosa. S. Icuicifoliaf L. :C. T.V.,16. 54 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. SUB-CLASE 2*. — ALBUMINADOS Y ESPADICIFLOROS. Familia 31. — LEMNÁCEAS. — Yerbitas que se presentan á la superficie de las aguas estancadas especialmente, en donde for- man una especie de alfombra verde algo rojizo y que consisten en una ó algunas hojitas casi discoideas ó Ientiformes, espesitas ordina- riamente, sin tallito ninguno, de la cara inferior de las cuales salen unas raicitas. Flores monoicas en número de uno ó dos, envueltas en una espata antes de la floración, de las cuales las masculinas constan de un solo estambre sin periantio ninguno, de antera unilo- cular, mientras las femeninas, también envueltas por una espata persistente y sin. ningún perigonio , son formadas de un ovario unilocular biovulado, terminado por un estilo único con su correspon- diente estigma. Capsulita unilocular y con dos semillas, cuyo em- brión axil, antitropo ó anátropo, es macrópod o y acanalado interior- mente. Lemna polWrliiza, L. L. gibhosa, L. L. minor, etc. Familia 3:2. — PISTIACEAS. — Plantas herbáceas, anuales, nadantes, flagelíferas, que con frecuencia se hallan terrestres en el fango medio desecado de las lagunas , de raices con divisiones sim- ples cubiertas , cuyo tallo es cortísimo, algo grueso, separándose mas inferiormente, en partes planas; hojas pecioladas, algunas ve- ces sentadas, dispuestas en roseta, acuñadas ú obo\ales, elípticas ó sub-orbiculares, con bozo como pulverulento por la base de su cara inferior, de nervaduras paralelas, cuyos nervios de la parte supe- rior é inferior están separados por celdillas medulares máximas ; vai- nas hialinas finamente membranosas y caducas; espatas solitarias, axilares, sentadas ó pecioladas, mas largas que los espádices yal prin- cipio ceñidas por una bráctea hialmea vainal caduca. Flores monoi- cas en número de dos superpuestas y situadas en la parte inferior de una espata tubulosa, persistente y mas ó menos coloreada, cuya su- perior es masculina y Cc^duca, inserta por la base del espádice ante- rífero muy diminuto y soldado con el perigonio verde, pequeño y escuteliforme ; tal espádice cilindrico, sub-claviforme, semi-libre, lleva en el ápice ó por debajo de él dos á ocho anteras dispuestas en una serie y verticiladas ; estas anteras sentadas ó cortísimamente estipitadas, dorsofijas y cuadriloculares, se abren esteriormente por cuatro poros sobrepuestos dos en dos, cuyos granitos polínicos son ovales y lonjitudinalmente estriados; ovario unilocular inserto al perigonio escamiforme verde y deciduo colocado oblicuamente, y espádice adherido lateralmente en el fondo de la espata, con pocos ó con muchos huevecillos parietales derechos y ortotropos; estilo ter- minal, corto, algo encorvadito, con un estigma obtuso y glandulí- fero. Baya unilocular, mucilajinosa interiormente oligo-polisperma, cuyas semillas oblongas ó de forma variada, lisas ó rugositas, colo- cadas sobre un podospermo de base cóncava y de ápice truncado, asurcadas radiantemente , con el estremo micropilar cerrado ó abierto; de tegumento doble, cuyo esterior es suberoso engrosado, mientras el interior es membranáceo ; embrión minuto, de cotiledón obovalo y situado en el ápice del endospermo. Pistia ocGidentalis, Klotzsch. C. T. Y., párr. 577. CLASE XIV. — CO^■ÍFERAS. 55 SÜB-DIYISIOX II. — VEJETALES FAIS'ERÓGAMOS DIC0TILED(3NE0S. sección 1. — apétalos. ORDEX í. — GiraNOSPERMOS. CLASE XIY. — COTnÍFERAS. ■ Familia 33. — ABIETINFAS. — Arboles elevados j mas ra- ras veces arbustos desparramados, ramosísimos con hojas casi siem- pre perennes, estrechamente lineares, ríjidas, esparcidas ó amano- jadas V los manojillos ordinariamente de base metida dentro de una vaina membranosa. Flores unisexuales amentáceas , con escamas ovulíferas, verdaderos carpillos abiertos empizarrados al rededor de un eje común y configura de cono ó estróbilo, mientras los amen- tos formados por las flores masculinas, son terminales ó laterales, solitarios, amontonados, ó espigados, con muchos estambres des- bracteados insertos en el eje por todos lados y mas ó menos apreta- dos; de filamentos cortísimos, gruesecillos; superiormente prolon- gados en un conectivo escamiforme, derecho ó encorvado, que lleva anteras las mas veces biloculares, con las celdillas aovado-oblongas, reparadas por un estrecho conectivo y separadas por el mismo pro- longado, lonjitudinalmente dehiscentes ó con menor frecuencia rotas al través, otras veces tres ó multiloculares, con las celdillas cilin- dricas, pendientes del conectivo prolongado sobre ellas, lonjitudi- nalmente abiertas y cuyo polen es globoso. Las flores femeninas constan de carpillos numerosísimos escamiformes insertos por todos lados en el eje mas ó menos prolongado, empizarrados, engrosados en el ápice ó iguales, algunas veces aguzados ó arrejonados debajo del ápice, rarísimas veces desnudos, casi siempre provistos de una bráctea libre ó pegada, persistente ó al fin desvanecida, con hue- vecillos apareados en cada carpillo, raras veces temados ó solita- rios é inversos, ortótrbpos, abiertos por el ápice, prolongado en cuello y pronto cerrados, alados. El fruto es una pina ó cono forma- do de las hojas carpelares, liñescentes ó coriáceas engrosado-areo- ladas en el ápice, raras veces atenuadas, persistentes ó al fin sueltas por la base, con brácteas desvanecidas ó persistentes entre las ho- jas carpelares, con semillas según el número de huevecillos binados ó temados debajo de las hojas carpelares escavadas, rarísimas veces solitarias y pegadas, inversas, con tegumento coriáceo ó leñoso, prolongado en una ala membranosa persistente y caediza con la se- milla ó algunas veces mas pertinazmente adherida al carpillo y se- 56 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. parada de la semilla en la madurez; endospermo carnoso-oleoso ; embrión frecuentemente multíplice , inverso, cuyos cotiledones oblongo-lineares, agudos ú obtusos, son en número de tres hasta quince, y raras veces de dos, y cuya raicilla, cilindrica y dirijida al vértice de la semilla, es infera respecto del ápice del carpillo. Pinus Bahamensis, Gr. AMes haUama, L. C. T. V. párr. 349. P, ccciden- talis. Fámula 34. ~ CüPRESINEAS. — Árboles y raras veces ar- bustos, ramosísimos, con hojas opuestas, verticiladas ó esparcidas, ordinariamente pequeñas, ríjidas, perennes y con frecuencia empi- zarradas porseries. Flores unisexuales, amentáceas, de&bracteadas, empizarradas j de amentos terminales ó laterales , solitarios ó amontonados, algunas veces espigados con los estambres y las esca- millas ovulííeras, insertos en un eje común. Las masculinas se com- ponen de estambres numerosos, desnudos, insertos en el eje casi ho- rizontalmente por un filamento cortísimo grueso, prolongado en un conectivo escamiforme, escéntricamente abroquelado con la márjen superior del conectivo mas angosta, mientras la inferior, anterífera por debajo, lleva anteras con vario número de celdillas paralelas, separadas, pegadas, aovadas ú oblongas y lonjitudinalmente dehis- centes, con polen globoso. Las flores femeninas son formadas de carpillos en corto número, desbracteados, abiertos, verticilados, abroquelados é insertos al rededor de un eje acortado, ó en el mis- mo eje prolongado, con huevecillos solitarios, apareados ó indefini- dos en la base del carpillo ó cerca de su estípite, sentados, derechos, ortótropos, abiertos en el ápice y comunmente prolongados en un cuello estiliforme y cerrado después déla fecundación. El fruto es un sincarpio drupáceo ó apiñado, con los carpillos, carnoso-engro- sados ó leñosos, endurecidos, estrechamente aproximados, algunas veces unidos por las márjenes y al fin de nuevo separados. Semillas derechas desde la base del carpillo, solitarias, apareadas ó numero- sas con tegumento membranáceo, leñoso ó huesoso, angulado ó ala- do, con endospermo carnoso y embrión inverso, cuyos cotiledones son dos, raras veces mas, y entonces tres y hasta nueve, son oblon- gos, obtusos, y su raicilla cilindrica se dirije al vértice de la semi- lla y es sÚDera respecto del carpillo. Juni^Jerus Barhadensis, L. — C. T. V., párr. 350. CLASE XV. — CICADOÍDEAS. Familia 35. — CICADEAS. — Árboles mas ó menos altos, cuyo tronco es un astil, ó plantas vivaces sin ningún tallo visible ó apa- rente en la superficie del suelo, pero que, sin embargo, siempre existe subterráneo perpendicular mas ó menos grueso, simulando una raiz perpendicular, de cuyo vértice salen algunas hojas pinati- sectas derechas, grandes y dispuestas á manera de corona, alternas y enrolladas á manera de báculo antes de su entero desarrollo; de divisiones ú hojuelas mas ó menos grandes y estrechas opuestas ó alternas, mas ó menos pronto caducas. Flores dioicas en espigas \ DICOTILEDÓNEOS. CLASE XVI. — PIPEEÍNEAS. 57 amentiformes ó que parecen conos, terminales, bastante gruesos, derechos, pedunculados, ordinariamente sencillos, solitarios ó en número de tres ó de cinco, cuyos masculinos son mas largos, mas delgados y mas puntiagudos, y formados de escamas mas ó me- nos carnosas, espatuladas que llevan muchos estambres pegados por su cara inferior mas ó menos cubierta con ellos, y cuyo cada uno constituye una flor masculina. Los conos femeninos son mas grue- sos, mas cortos, como truncos por el vértice, y compuestos de esca- mas mas espesas, mas densamente apretadas y abroqueladas con dos flores femeninas inversas ó trastornadas, situadas hacia la axila y pegadas en la cara inferior, las cuales se componen de una especie de cáliz globoso con un pequeño horado en su vértice y aplicado al ovario, al cual está en parte adherido por la base; ese ovario es unilocular y de su vértice sale un estigma con forma de pezón. El fruto es una especie de nuez ó de drupa como esponjosa por causa del cáliz que á veces se vuelve carnudo y simula así un pericarpio ; con una semilla compuesta de un endospermo que tiene alojado un embrión de dos cotiledones desiguales, coherentes entre sí y cuya raicilla está soldada con el endospermo. Zamia. 1. Hojuelas linear-oblongas sub-falcadas, con figura de cuña, redondeado-obtusas por el vértice aserradito. — Z. integrifo- lia, Ait., C. T. V., párr. 205. — Hojuelas lanceolado-lineares, nunca sub-falcadas ni con figura de cuña por la base, raquis iner- me, 2. 2. Hojuelas alargadas, estrechamente lineares, enteras, con al- gunas pocas nervaduras ; dos veces escotadas y obtusas á la vez con calles en el vértice. Z. aiigustifolia, Jacq. — Hojuelas obtusas, planas, aserradas por debajo de la punta; raquis comprimido, liso y triquetro. Z . medía, parr. 205. ORDEN lí.-ANJiÓSPEPiMOS. SUB-ÓRDEN 1°. — APÉTALOS. SERIE l\ — APERIANTEOS. Vienen á agruparse en esa división las familias cuyos vejetales tienen sus flores desprovistas de periantio y por consiguiente ente- ramente desnudas, ó cuyo periantio está á veces reemplazado por una ó por algunas escamas. GRUPO 1°. — HIPÓJINOS. CLASE XVL — PIPERÍNEAS. Familia 36. — CLORANTACEAS. — Arbustos ó matas, raras veces plantas herbáceas y anuales, con olor aromático muy pronun- 58 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. ciado, cujas hojas simples j opuestas tienen el peciolo envainador, trabado y acompañado de estípulas. Flores hermafroditas ó uni- sexuales, diminutas terminales ó raras veces axilares, cuyas herma- froditas y masculinas están dispuestas en espigas, mientras que las femeninas están apanojadas; todas están desnudas; las masculinas se componen de muchos estambres, ó de uno solo, insertos en un eje común formando así una espiguita amentácea, apretados y empizar- rados, sin hráctea ninguna; cuando el estambre es único está acom- pañado de una bráctea en cuya base se encuentra pegado; filamen- tos cortísimos que llevan una antera bilocular, cuyas celdas lineares y marjenales, con respecto al conectivo, son lonjitudinalmente de- hiscentes. En las flores hermafroditas ios estambres, en número de uno á dos ó cuatro están pegados en el dorso del ovario por filamentos aquillados, entresoldados por la base, desiguales y cuyos laterales, mas cortos, tienen sus anteras uniloculares. Ovario simple, sentado, trígono y casi globoso unilocular, cuyo único huevecillo, suspendido del vértice de la celdilla, es ortótropo; estigma terminal sésil, ob- tuso ó deprimido, escotado por un surco ó casi lobado y caduco. El fruto consiste en una especie de drupa abayada, monosperma, con el cuesco tenue y frájil, cuya semilla pendiente y con tegumento te- nuísimamente membranáceo tiene un endospermo carnoso, conte- niendo un embrión inverso diminuto y situado por su vértice, cuyos cotiledones cortísimos están apretados y con raicilla infera Hediosmum Swtz. 1. Hojas lanceolado-lineares , 2. ■ — Hojas elíptico-lanceoladas, 3. 2. Arbusto de hojas aguzadas, aserradas jDor la base, lampiñas, largas de 5"-3" y anchas de 10'" á 12'", de peciolo tan largo como la vaina ó de 3"' ; amentos ó espiguitas masculinas ovoideo-oblon- gos, obtusos y nudosos, mientras las flores femeninas se hallan al- ternas á lo largo de ramitas anguladas, y forman así corimbitos tri ó pluriramosos. H. Niitans, Swtz. 3. Arbusto como de unos 12' á 16' de altura, con hojas glabras, aserradas hasta en medio ó solamente por la base, largas de 4"-2" y anchas de 18"'-8"', cuyo peciolo, largo de 8'" á 4'", tiene una vaina tan larga como él. Flores femeninas en racimos formados de espi- guitas trífidas cuyas dos laterales son mas cortas que la de en me- dio. H. ariorescens, Swtz. C. T. Y., 230. Familia T¡. — PIPERÁCEAS. — Plantas herbáceas anuales ó perennes, ordinariamente terrestres, algunas veces parásitas y comunmente suculento-carnosas; otras veces, y con frecuencia, matas ó arbustos, cuyos tallos nudosos parecen como articulados, algunas veces sarmentosos ó trepadores, con ramos axilares y soli- tarios ú opositifolios; hojas simples opuestas ó verticiladas y algu- nas veces alternas por causa de aborto, integérrimas, y de peciolo mas ó menos envainador por la base, sin estípulas, palmatinervias mas ó menos lisas ó ásperas, pubescentes ó lampiñas, carnosas y do- bles ó delgadas y coriáceas ó membranosas, con ó sin puntitos trans- parentes. Flores hermafroditas ó unisexuales por causa de aborto, sen- tadas en espádices, ordinariamente carnosas, ó casi sumerjida.só ani- dadas en las brácteas, que son abroqueladas ó pegado- escurridas, DICOTILEDÓNEOS. CLASE XYI. — PIPEEÍNEAS. 59 raras veces pediceladas; se componen de una bráctea, cuya figura y tamaño son bastante variados, la cual acompaña á cada ñor y reem- plaza así al perigonioque siempre falta; de estambres en número va- riado: en efecto, unas veces son dos, situados uno de cada lado del ova- rio, otras veces tres, de los cuales uno es posterior, ó cuatro, cinco, seis y por fin, en número indefinido, pero soliendo abortar algunos de ellos; sus filamentos, cortísimos ^Oineares, están adheridos al ovario por la base y llevan anteras estrorsas aovadas y pegadas, las cuales, ordinariamente biloculares , con ó sin conectivo , y raras veces uni- loculares, se abren lonjitudinalmente. El pistilo está formado de un ovario simple, sentado, casi globoso, unilocular y monospermo, cuyo huevecillo único es basilar y erguido, de estigm^a terminal casi obli- cuo ó un poco lateral, corto, alesnado ú orbicular, indiviso, tri ó cuadrílobo, lampiño ó pelierizado. El fruto es una baya monosper- ma, parcialmente carnosa, pequeña y cuyo pericarpio es á veces muy delgado, ovoidea ó mas ó menos globosa, con una semilla de- recha, lisa ó asurcada, casi globosa, cuyo tegumento cartilajinoso y tenue contiene un endospermo doble casi cartilajinoso y comun- mente ahuecado por el centro y un embrión diminuto y antítropo, apeonzado ó lenticular, con dos cotiledones cortísimos y gruesecitos y una raicilla supera. G. I. VivB'Raro7naticíí7n, L. : C. T. Y., par. 19. G. II. PoTOMOEPHE, Miq, 1. — Hojan peltadas ó abroqueladas, de base un poco acorazonada y cerrada siempre, 2. — Hojas nunca abroqueladas, de base acorazonada abierta ó bífida, 3. 2. Mata fruticosa de como unos 4' á 6' de altura, algo mas ó me- nos, cuyo tallo, mas ó menos ramoso, derecho y nudoso, es lampiño y verde con las partes mas tiernas glaucas, lampiño. Hojas muy grandes, de limbo casi orbicular, acorazonado y con una puntita por el vértice, de como 8'' á 10" de diámetro, con 13 nervaduras, de las cuales dos pares salen por debajo de la costilla, de cara supe- rior verde oscuro y lustrosa, mientras la inferior es de un color verde mucho mas pálido y un poco amarillento; algo undulosas y enteras, con peciolo largo de 2" á3", cilindrico, estriado y glauco, cuya base es envainadora; al desprendérselas hojas, se queda en la parte correspondiente del tallo ó de los ramos una cicatriz anu- lar. Pedúnculos axilares erguidos, cilindricos, de como 1" l\2 á 2' de largo y cuyo vértice carga con 5 á 12 espádices amentiformes que salen sucesivamente de una bráctea espatiforme que tiene en- vuelta la base de los padícelos largos, de como 4'" y que sostienen los espádices largos de como 3" á 4'', delgados, cilindricos y for- mando una especie de umbela; la espata es lanceolada, caduca, y tiene como unas 2'" de largo. P. peltata, Miq.: C. T. V., par. 355. 3. Mata fruticosa de como unos 3' á 8' de alto, cuyo tallo, dere- cho y erguido, mas ó menos ramoso, estriado y rojizo, es algo pu- bescente, especialmente en sus partes mas tiernas. Hojas grandes acorazonadas, enteras y con una punta deltoidea por el vértice, de nervaduras en número de 11 á 13, de las cuales un par sale por debajo de la base de la costilla, 6" á 10'' de diámetro tiene el lim- bo; peciolo de como 6'" á 8" de largo, y cuya base membranosa 60 . DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. abraza el tallo y contiene los espádices amentáceos; antes de la flo- rescencia es peludo. Pedúnculos axilares, largos decomounasG" á8", llevando en su vértice tres, cinco ó seis espádices amentáceos, largos como 2" á 4", cuyos pedicelos, largos de 5''' á 6'", salen de la axila de una bráctea escamosa, redonda y un poco pestañosa. P. umhella- ta, Miq.: C. T. Y., par. 20. G. III. Pepeeomia, R. P. , 1 . — Hojas alternas y rarísima vez opues- tas, 2. — Hojas siempre opuestas ó verticiladas ; estigma terminal, 43. 2. Siempre alternas y de nervaduras palmeadas, 3, — Alternas, pero algunas veces parcialmente opuestas, de costilla bien pronun- ciada y achatada ; estigma diminuto, subulado y picudo y anterior- mente lateral, 28. 3. Estigma sentado en el vértice del ovario, 4. — Estigma dimi- nuto situado en el lado anterior del ovario subulado y picudo, 28. 4. Yerbas delicadas, rastreras y arraigantes; frutas subsesiles, sin pico ninguno, 5. — Plantas herbáceas cuyo tallito poco elevado es sim- ple ó masó menos ramoso; fruto estipitado, sentado ó subsesil, 14. 5. Tallo siempre lampiño , 6. — Tallo tan pronto pubescentito como lampiño, 11. 6. Hojas orbiculares, planas y membranoso-pestañadas; fruto ovoideo subsesil, 7. — Hojas obcordadas ó arriñonadas, nunca pes- tañosas, 8. 1. Tallitos filiformes, difusos ó esparcidos, flexuosos, largos de algunas pulgadas, lampiños, con las ramitas amentíferas tan largas como los espádices que llevan; hojas lampiñas con pestañas largas y distantes, cuyas tres nervaduras son apenas visibles, anchas de como 3'", transparentes y sin puntitos negros ; filamentos de los es- tambres distintos ; estigma diminuto, amentos de 6'" á 4"'; fruto ovoideo subsesil. P. exiüs, Gr. Acrocarpidüwi exile, Miq. 8. Obcordadas y plano-cóncavas; fruto ovoideo subsesil, 9. — Ariñonado-redondas con una puntita obtusa; fruto oval, puntiagudo y sentado, 10. 9. Tallo filiforme mas ó menos largo, lampiño, hojas glabritas con tres nervaduras apenas notables, largas como de 7^" 4'" y an- chas de 5'" á 4'^', retusas por el vértice y anchamente acuñadas ó redondas por la base; anteras subsesiles; amentos largos de 8'" á 10'" y cortamente pedunculados; parásita ó que se halla sobre las piedras, P. cor difolia, Dietr. Pi])er cor difolia, Sw. Ac7'0carpidium cordifoli?im, Miq. 10. Hojas orbiculares ó discoideas, convexas superiormente y cóncavas inferiormente, carnoso -pestañosas, 12. — Hojas ovales; las inferiores son ovalo-redondas y planas, 13. 12. Tallos elongados cuyas ramitas amentíferas son largas de como 1" "á 1" 1/2, filiformes, ramosos y largos de 6" á 12", algo mas ó menos, con pelo esparcido y arqueadito, negros y lustrosos; hojas con tres nervaduras apenas notables, anchas de 3"' á 4"' ; anteras subsesiles; estiíyma diminuto, parásita ó terrestre á la vez. P. nmn- mularifolia, Kth.: C. T. V.,párr. 290. 13. Se cria tan pronto parásita como sobre las rocas y entre el musgo, cuyos tallos elongados y filiformes tienen las ramitas amen- DICOTILEDÓNEOS. CLASE XVI. — PIPERÍNEAS. 61 tíferas mas largas que en la especie anterior; hojas lampiñitas cuya cara inferior tiene puntitos rojizos, con tres nervaduras apenas pro- nunciadas, de 4'" á 5"'' de largo por 3'" á4'" de ancho, cuyas cerdas marjinales acaban por desaparecer; anteras sésiles; estigma dimi- nuto, ovario ovoideo. P. rotuncUfolia, Kth. P. xiceiitina, Miq. Pii)er rotuncUfoUum , L. Sw.: C. T. V.,pár. ^OO. 14. Tallo bajito, simple ó con algunas ramitas; fruto estipitado, 15. — Tallo no tan bajito y siempre ramoso; fruto sentado ó subse- sil, 18. 15. Hojas ovaloblongas, obtusitas y lampiñas, pestañosas ; fruto elíptico, 16. — Hojas redondas, recortadas por la base, algo pelu- das; fruto fusiforme, pelierizado y estipitado, 17. 16. Parásita entre los musgos, cuyo tallo, largo de 2" á 3", lam- piñito, simple ó sencillamente dividido y ascendente, sale de una base sin hojas, .filiforme y arraigante; hojas delicadas, pestañosas hacia ó por el vértice, planas, con tres nervaduras apenas notables, cortamente pecioladas y largas de unas 4'" á 8"\ sobre 2'" ó 3'" de ancho; amentos terminales solitarios, cortamente pedunculados y largos de 10'" á 12''' ; filamentos de los estambres distintos, estigma apincelado; fruto fusiforme, lampiño y constantemente estipitado. P. tenella, Dieter. Piper tenellus^ Sw. Acrocar^icliimi teiiellum, Miq. 17. Tallo lampiño, simplemente ramoso, suberguido 3^ largo de 2' á 3" ; hojas con pelo esparcido por la cara superior, mientras que la inferior es lampiña; filamentos de los estambres muy cortos; fruto redondo. P, hispidula, Swtz. Pijjer Uisjñdulus, Sw. 18. Yerba pubescentita y suculenta, 19. — Plantas herbáceas siem- pre lampiñas y mas ó menos suculentas, 20. 19. De tallo alto como de 1', ascendente y ramoso, con hojas del- gadas, ovales ó elípticas, puntiagudas ú obtusas, manifiestamente trinervias y cuya cara inferior está provista de puntitos negros y de pelo corto y ordinariamente encorvado, largas de 1" 1/2 y ancha de 10'" á 6"', con peciolo estrecho; estigma terminal; fruto subgloboso, sentado y obtuso; amentos pedunculados de como 4'" á 1'" largos. P. Mrtella, Miq. 20. Bastante suculentas, 21. — Nunca suculentas, pero membra- noso-transparentes, 22. 21. Tallo delicado, ordinariamente espitámeoóde 6", esparramado, con hojas sub-acorazonada-deltoideas, puntiagudas, tres á siete ner- vios, anchas de 10'" á 14'.' y largamente pecioladas; amentos termi- nales ó axilares largos de l"á 2" y cortamente pedunculados, cuyas flores distantes están provistas de brácteas y deciduas; filamentos délos estambres distintos; estigma apincelado; fruto redondo ú ovoi- deo, obtuso y sentado. P. "pellucida, Kth.: C. T. V., par. *711. 22. De tallo trepador ó arraigante, 23. — De taUo ni trepador, ni arraigante, pero desparramado, 24. 23. Manchad'o con puntitos negros, bastante blandos y cuyas ra- mitas son esparramadas ó diverj entes; hojas ovales ú ovalolanceo- ladas y puntiagudas ó aguzadas por el ápice, triple-nervias, con dos venas accesorias, provistas de puntitos negros por ambas caras, lar- 62 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. gas como de 1" á 2 "' sobre 6'" á 12'" de ancho; peciolo estrecho; amentos largos de 1" á 4" y cortamente pedunculados ; estigma di- minuto; fruto ovoideo y globoso con un piquito corto y oblicuo ; pa- rásita ó criándose en las paredes viejas. P. glahella, Dict. P. nigro- picnctata, Miq. PÍ2)er glabellum, Sw. P. dictachyon, Sieb. 24. Erguido, ramoso y con hojas elípticas, cuya cara inferior lleva puntitos negros, 25. — Desparramado con hojas ovalolanceoladas sin puntitos negros, 26. 25. Como de S"' á 10" de alto, cuyas hojas quinquenervias, pun- tiagudas con el ápice obtusito y ovales por la base, son largas de 1" 1/2 á 1" sobre 1'' 1/2 ál" de ancho; peciolo corto, acanalado }' en- vainador; amentos cortaramente pedunculados y largos de 3" á 5"; estigma diminuto ; fruto globoso y sentado, con un pico corto y de- recho, P. acuminata,^liq^. P. oMiqua, R. P. P. hamiltoniana, Miq. PijWí' acuminatnm, Sw. 26. Se parece mucho al anterior, pero es parásita y con hojas elíptico -lanceoladas aguzadas, obtusitas por el ápice y de base estre- chándose hasta volverse peciolo, trinervias, con dos venas acceso- rias, largas de 1" 1/2 á 4"', sobre lj2 á 1'' lf2 de ancho; amentos cortamente pedunculados y largos de 18'" hasta 4"'; estigma dimi- nuto; fruto globoso, sentado y con un piquito algo oblicuo. P. den- dro2)hyla, Schlest. Piper temdflorurii, H. K. B. 27. Yerba pubescentita y suculenta, cuyo tallo rastrero y arrai- gante echa ramitas cortitas y ascendentes con hojas delgadas deltoi- deo-redondas, obtusas, cinconervias, sin putitos negros, anchas de 4'" á 9'", de limbo casi tan largo como el peciolo y de cara inferior glabrita; amentos cortos casi tan largos como los pedúnculos ; fruto oblongo; cilindrico, subsesil, poco carnoso y con un piquito linear. P. repens, Kth. P. reniformis, Hook. Piper hracteatum, Thomp. Acroc. rejjens, Miq. Acroc. gidldingianum, Miq. 28. Yerba suculenta de tallo rastrero y arraigante con el vértice erguido, cuyas hojas delgadas son abroqueladas ó con el limbo dis- tinto del peciolo, 29. — Plantas herbáceas suculentas y lampiñas cuyo tallo ascendente ó derecho lleva hojas cuya base se estrecha hasta volverse frecuentemente peciolo, 29. 29. Siempre lampiñas, 31. — Tan pronto glabras como pubescen- titas, 30. 30. De hojas alternas, distantes, delgadas, ovales, con una pun- tita obtusita, cuya base es subcordada ó redonda, pestañosas, con siete nervaduras apenas notables, largas de 1" ó 2" sobre 6'" á 18'" de ancho ; peciolo ordinariamente mas corto que el disco é inserto por la base ; amentos generalmente mellizos, casi tan largos como los pedúnculos ó como de 1"' á 2" ; ovario picudo ; fruto ovoideo, sentado y mas largo que su pico encorvado. P. distaclnja, Diet. — Piper distachyíimy L. 31. Hojas abroqueladas, ovales y cuspidadas ; amentos solitarios mas cortos que el pedúnculo alongado, 32. — Hojas elípticas, re- dondas por la base y subabroqueladas ; amentos ordinariamente me- llizos, 33. 32. De tallo mas ó menos largo, cuyos internudos son de 2" ó 3" DICvOTILEDÓNEOS. CLASE XVI. — PIPERÍNEAS. 63 de largo> con hojas alternas distantes, delgadas, siete á nueve ner- viositas, largas cíe 1"' 1/2 á 3" sobre 9'" á 24'" de ancho; amentos largos de 1" á 2"; ovario picudo: fruto ovoideo, sentado y tan largo como su pico. P. hernancli folia, Diet. — P. ponthienei, Miq. — Pi- 2)er hernandifoUum, V. 33. Hojas alternas distantes, delgadas, constantemente cuspida- das, con una punta oblicua y nerviositas, largas de 3" á 2" sobre 2" ó 1" de ancho, papiráceas, opacas y cuya cara inferior tiene puntitos amarillos poco notables, de base redonda y escurrida de una línea sobre el peciolo, tan largo como el disco y que se inserta inmediatamente por encima de la base, algo acanalado y tan largo como los internudos; amentos largos del" á 1" 1/2, ordinariamente mellizos, mas cortos o^ue el pedúnculo, erguidos y axilares. Ovario picudo ; fruto ovoideo y oblongo á la par, sentado y mas largo que su pico encorvado. P. prochicta, Gr. 34. Carnosas y suculentas á la par, 36. — Solamente suculentas ; amentos cortos y subsesiles, verticilados en la parte afila de las ra- mitas y dispuestos en panoja terminal, 35. 35. Tallo como de 1' de alto, derecho y erguido, cuya parte infe- rior es sin hojas, mientras el vértice las tiene alternas, papiráceas, elípticas, mucronadas por el ápice redondo, de base aguzada que se vuelve peciolo, largo de 1/2 á 2", peninervias, largas de unas 3" á 8" sobre 1 1/4 ó 3" 1/2 de ancho; panojas largamente pedunculadas y tan largas como las hojas ; amentos cortos subsesiles ; largos como de 6 á 11"' y en número de 4 á 8 por verticilo ; ovario picudo; fruto ovoideo con apéndice cortoiyipico deciduo. P. Pernamhucensis, Miq. .36. Tallos erguidos, 37. — Tallos ascendentes, 42. 37. Tan pronto ascendentes como, erguidos, 38. — Ascendentes solamente y siempre, 39. 38. De hojas inferiores opuestas, mientras las superiores son al- ternas, todas coriáceas, elíptico-redontitas, puntiagudas por ambos estremos, largas como 1 1/2 á 2" sobre 10"' de ancho, cortamente pecioladas y peninervias ; amentos solitarios y mas largos que las hojas; ovario picudo, P. alpina, Diet. 39. Hojas coriáceas anchamente ovales ó espatuladas y peciola- ditas; fruto tan largo como su pico, que es tieso é inclinado, 40. — Hojas coriáceas espatulado-lanceoladas, ó espatuladas sésiles ó sub- sesiles ; fruto mas largo que el apéndice que lleva el pico deci- duo, 41. 40. Como de 1' de alto, con hojas retusas ú obtusas, peninervias, largas de 2"-3"-6", sobre 21/2 á 3" de ancho, de peciolo acanalado largo, como de 4 á 12"' ; amentos subterminales largos como de 2 ó 6", ordinariamente mellizos, elongados y arqueados, cuyos pedún- culos son tan largos como las hojas ; ovario picudo ; fruto ovoideo y sentado. P. oIj tu si folia, Dietr. Var. — P. cmieata, Miq. — P. ^a- pyracea. P. ohUcsifolmm , L. — P. clusiifoUum, Jacq. 41. Figurado las hojas muy variada, aveces obovales y obtusi- tas, obtusas ó retusas, peninervias; amentos largos de 4 á 6", ordi- nariamente mellizos, elongados y cuyo pedicelo tiene 1"; ovario 54 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. picudo, fruto ovoideo, sentado y de pico filiforme. Piper cuneifo- Ihwi, Jacq. — P. magrooUfoUum, Jacq. — Pemia siüartiaiía. P. am- 2)lexicaiilis, Diet. 42. Como de 1' de altura, con hojas elípticas ó elíptico-oblongas, obtusitas, estrechándose hasta volverse peciolo corto, acanalado y largo, como de 4"' á 8"', peninervias y cuyas venas son muy poco visibles, largas de 3" á 5'', sobre 2 1/2 á 1 1/4" de ancho; amentos ordinariamente mellizos; elongados y largos como de 4'"; ovario picudo. P. talinifolia, Kth. 43. Eje del amento unido y liso ; fruto sin apéndice, 44. — Eje del amento con hoyitos ó facetas, fruto picudo, 61. 44. Hojas delgadas y con puntitos, 45. — Hojas tiesas y opa- cas, 58. 45. Tallo rastrero filiforme mas ó menos largo, arraigante y de cuatro caras, 46. — Tallo erguido ó ascendente, 47. 46. Cuyas ramitas cortas son ascendentes, con hojas obovales, ovales ó espatulado-obtusas, ó recortadas, trinervias , lampiñas, pestañosas y provistas de algunos puntitos grandes y trasparentes, y dispuestas en verticilos de á 4 ó de á6 ú opuestas, largas de 3 ó 2'" sobre 2 ó 1" de ancho; amentos largos de 4 ó 2"", terminales, soli- tarios y pedunculados , con las flores aproximadas. P. swatziana, Miq. — P. tenerrisma, Schl. — P. filiforme, Sw. 47. Siempre erguido, 49. — Erguido ó ascendente; hojas ovalo- lanceoladas, lampiñas y con puntitos transparentes, 48. 48. Planta como de 1", cuyo tallo ramoso y subciiíndrico lleva hojas verticiladas por á 3, á 4 ó á 5, aguzadas y con una punta ob- tusa, trinervias y largas de 12'" á 16'" sobre 3"" á 6'" de ancho, y cuyo peciolo es largo de 2 á 1"'; flores distantes en amentos fiii- 'formes, derechos, cortamente pedunculados y largos de 3 ó de 2"; fruto sentado y obtuso. P. sieUata , Dietr. — Piper stellatiim, Sw. 49. Lampiñito, ramoso y subciiíndrico, 50. — Mas ó menos pu- bescente ó peludo, 51. 50. Planta cespedosa como de 4'' á 8" de alto, cuyas hojas, ver- ticiladas por á 4ú opuestas, son lanceoladas ó elíptico-lanceoladas, aguzadas con una punta obtusa, apenas trinervias, glabras j cuyos puntitos transparentes son muy poco notables, largas de 4'", 14"' ó 18"', sobre 3'" ó 4'" de ancho; llores aproximadas entre sí, pero distantes alo largo de los amenfos, largos de 4'" á 12'". P. mirtil- lus, Miq. ? ' 51. Mas ó menos cilindrico, mi./" ó menos pubescente ó peludo y siempre ramoso, 53. — Solamente ''^^abescente , cuyo vello es muy cortito, estriado, simple ó ramoso, 52. 52. Yerba como de 1' de altura, con hojas opacas y suculentas, largas de 1" ó 2", sobre 4'" ó 15'" de ancho, verticiladas por á 3 ú opuestas, elípticas, elíptico-redondas ó elíptico-lanceoladas, pun- tiagudas ü obtusas por ambos estremos , uni-trinervias, pubescen- titas y con puntitos negros densamente agrupados en ellas, y con peciolo largo de '2, 4"'; amentos largos de 1 1|2 ó 5", terminales, M<'f»TILKl)ÓMíOS. CLASE Wi. — l>n>ERÍNEAS. 65 cortamente peduiiculados. flores distantes en el eje elongado; fruto ovoideo sentado y obtuso. P. ciliata, Kth. 53. Pubescentito ó pubescente. 55. — Densamente velludo j es- triado, pelo tan largo como ancho j articulado, 54. 54. Planta cespedosa, alta como de unas 4 ó 6", cuyas hojas, ver- ticiladas por á 4 ó 6 ú opuestas, son obovales ú ovales, obtusitas ú obtusas, suculentas, largas de 3'" ó 4'", sobre 2 ó 3"" de ancho, cor- tamente pecioladas y trinervias, de cara superior, pubescentita ó alampiñada: mientras la inferior es siempre pubescente y tiene ade- más algunos puntitos transparentes bastante grandes ; amentos ter- minales cortamente pedunculados, de 6 ú 8'"' largos y con las flores distantes. JP. v ertlcülata,' J)\eiv. — Piper./üerUcillatvm, L. 55. Cilindrico, pubescente y con algunos pelos mas largos que los demás; hojas alampiñadas ó pubescentes sin puntitos negros, 56.' — Solamente pubescentito y con pelo muy cortito, subcilíndri- co, hojas lampiñitas con puntitos negros por la cara inferior, 5*7. 56. Yerba cespedosa alta de 3" ó 4", con hojas verticiladas, por á 3 ó 4, espatulado-oblongas, oblongas ó ovales, obtusas ú obtusitas, adelgazándose hasta volverse peciolo largo de \\l ó 1"", apenas tri- nervias, largas de 4"" ó 5'"', sobre •2"' de anchura, de cara superior alampiñada ó pubescentita, con puntitos transparentes apenas nota- bles; amentos terminales cortamente pedunculados y largos de 3'" á 4"*', con flores aproximadas. P. píilchcUa, ]Jietr. 57. Yerbado 1' de alto, cuyo tallo es tricótomo y fastigiado por el vértice, con hojas verticiladas por á 4 ó 6 ú opuestas, obtusas, trinervias, lampiñitas, subsesiles, largas de 3"' á4'''. sobre 2|3'" o r"'de ancho; amentos filiformes, derechos, cortamente peduncula- dos y largos como de 6"" á 15'"\ con flores distantes: fruto sentado y obtuso. P. galUoides^ Kth. 58. Tallo ersTuido v subcilíndrico, 59. — Tallo rastrero v de cua- tro caras, 60. 59. Planta altado T, cuyo tallo simple 6 algo ramoso y lampiño lleva hojas opuestas ó verticiladas por á 3 ó 4, ovalo-lanceoladas ó lanceoladas, aguzadas y mas puntiagudas que las demás, largas de 1 li2'\ 2" sobre 6""', 8'" de ancho, 5^ó7nervias, lampiñas, coriáceas y de base que se estrecha hasta volverse peciolo largo de 2"-3" ; amentos largos de 1'. terminales, pedunculados y con ñores aproxi- madas. P. septemnervis, R. P. 60. Cespedoso y meduloso, simple ó algo ramoso y lampiño, cuyas hojas opuestas, ovales, obtusitas, redondas por la base y trinervias, tienen 12"'' de largo, sobre 18''' de ancho, glabras y cortamente pe- cioladas: amentos axilares: largos de 6 á 8"', cortamente peduncu- lados y cuyas flores son aproximadas. P. quoAlro/ngnlariSy Dietrs. — P. muscosa, L.-K. — Piper quadrau guiare , Thomp. 61. Tallo ascendente, ramoso v estriado, 62. — Tallo rastrero, subcilíndrico ó cuadrangular, 63. 62. Planta lampiña cuyas ramitas erguidas son largas de 4"' á 6''; hojas raras veces ojjuestas y ordinariamente verticiladas por á 4, obovales, recortadas, acuñadas por la base que se termina en un pe- ciolo de 1|2 " ó \"' (\e largo, uninervias ó apenas trinervias, tiesas TOMO 11 5 66 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEKÓCtAMUS. y suculentas á la par, largas de 4"'' o 6"- y anchas de 2 ó 3'"', con puntitos transparentes apenas notables ; amentos terminales, largos de 1" ó 1 1\2>\ pedunculados, con flores aproximadas; ovario picu- do; fruto ovoideo cortamente picudo. P. rjuadrifolia, Klh. — Piper qiiadrifolium, L. 63. Subcilíndrico y cuyos ramos no son ni erguidos ni ascenden- tes tampoco, 67. — Tetrágono y de ramos ascendentales ó ergui- dos, 64. 64. Peludo do ramitos ascendentes solamente, 66. — Glabrito con ramitos erguidos ó ascendentes, 65. 65. Como de 2" á6"' de alto, simples ó sencillamente dicótomos, y lampifíitaslas ramitas; hojas verticiladaspor á3á4ó á6, romboideo- élipticas, obtusas, de base subsesil y acuñada, uninervias ó apenas trinervias, lampiñas, tiesas y suculentas d la par, largas de 4'" ó 6'", sobre 3 ó 5"" de ancho, oscuramente pelúcido puntaditas ; eje dos veces hoyoso y pubescente, cuyos amentos, largos de 6 á 8'" y obtusos por el ápice, son largos como el pedúnculo y llevan flores aproximadas; ovario picudito; fruto oval y con pico muy corto. Pa- rásita. P. reflexa, Dietr. — P. jíUformis, R. P. 66. Como de 2' ó 4" de alto con hojas verticiladas por á 3 ó á 4 ú opuestas, ovales ú obovales, mochas ó recortadas por el ápice, largas de 6" á 8" , sobre 6" á 8'" de ancho, trinervias, pestañosas, lampiñitas ó con pelo esparcido por la cara superior, suculentas y oscuramente pelúcido puntadas, cuyo peciolo tiene 1'" ó 2'" de lar- go; amentos terminales, solitarios ó temados, largos de 2" ó 3". cuyo eje glabro lleva flores aproximadas; ovario picudo, fruto glo- boso, cuyo pico es casi tan ancho como largo. P. trifoUa, Dietr. — P. ovalífoUa, Hook. — Piper trifoUiim, L. 67. Planta dea 8" 4"' , con hojas verticílidas por á 3ó á4ú opues- tas, ovalo-redondas i-ecortadas ó redondas por el ápice y también por la base, oscuramente trinervias, suculentas, pelúcido puntadas, cuyo peciolo es largo de 1 ó 2"', largas de 4 ó 5", sobre 3 ó 4'" de ancho; amentos terminales, cortamente pedunculados, largos de V o I 1[2"' y cuyo eje glabro lleva flores aproximadas: ovario obtuso de estigma espeso. P. ohversa, Dietr. — Piper ohversum, V. G. IV. Enkea, Kth. — 1. Hojas tiesas, cuyas venas transversa- les son dispuestas á manera de redecilla, 2. — Hojas membrano- sas, 3. 2. Arbusto bastante alto ó arbolito, lampiño, cuyas ramitas lle- van hojas papiráceas, grandes, ovales ú ovaloblongas, cortamente aguzadas, oblicuas, oscuramente pelucido-puntadas, lustrosas, lar- gas de 8'' á 10", sobre 5 ú 8" de ancho, cuyo peciolo es largo de 4'" ó 5"; amentos largos como los peciolos, cortamejite pedunculados y con flores contiguas; bayas ovoideas. E. smilaci folian Kth. — Piper decurnauuiti , W. 3. Bayas aproximadas y lijeramente asurcadas ; hojas ovales con puntitos transparentes, 4. — Bayas distantes á lo largo de los amentos y con surquitos bien marcados, 5. 4. Arbusto lampiño con hojas membranosas diminutamnnte pe- lucido-puntadas, ovales y con una punta estrecha y obtusa, á veces DICOTILEDÓNEO.^. CLASE XM . — IMPí.KÍNEAS, 6?| oblicuas por la base, 5 ó 7 nervias, largas de o o 4" y anchas d© 1 1|2 ó 2 1|'2'\ y cuyos peciolos sonlijeramonte pubescentes; amen tos de 1 1[2 ó 3" de larg-o; bayas ovales y obtusas. ^. sieheri, Miq, -^ F . planta (I mea, Kth. — Piper médium, Jacq. — P. discolor, Desc: C. T. Y., par. 389. 5. Hojas ovalo-lanceoladas ó bastado -subuladas y sin puntitos transparentes, 6. — Hojas ovales y con puntitos transparentes, "7. 6. Arbu^to lampiño que se eleva como á 3' ó 10' de altura, de ramos dicótomos, cuyas hojas, con una punta estrecha y ordinaria- mente obtusa, son 5 nervias, y largas de 2 lf2', 3"' ó 4", sobre 6, 8 6 24'" de ancho, tienen el peciolo y las costillas pubescentes; amen- tos largos de 3"; bayas ovales. E . o/úmlago, Gr. — E . ungvAculatay Glaucescens, Kth. — E. cea/iiothi folia, Miq. — E . carrifolia, Miq. — Piper amalago, L. — P. gloAicescens , Jacq. — P. vyiigvÁcv.latus, R. P.: C. T. Y., par. 390. 7. Arbusto lampiño cuyas hojas membranosas tienen una puntita estrecha y obtusa por el vértice, mientras la base es con frecuencia oblicua, redondeada, subacorazonada ó acuñada, trinervias y ade- más con 1 ó 2 pares de nervios suplementarios, largas de 3 á 6"\ sobre 1 1[2 á 3 lj2" de ancho ; amentos de 1 1\2" ó 4" de largo y de eje lampíñito; bayas ovoideas y oblongas lí la par, bruscamente pi- cudas. F. Sicartdi, Gr. — E . plantaginea. Miq. — Piper discolor, Sw. G. Y, Abtanthe, Miq. — 1. iNervaduras principales de las hojas con puntitos transparentes, arqueadas y mas distantes del vértice que no lo son entre sí, 2. — Nervaduras principales de las hojas lisas ó provistas de ampollas, situadas á igual distancia las unas de las otras como del vértice de la hoja, 13. 2. Hojas lisas y raras veces ásperas, 3. — Hojas siempre ásperas y de base muy desigual, 10. 3. De base mas ó menos desigual, 5. — De base igual: pedúncu- los mas cortos que el peciolo desnudo, 4. 4. Ramitas densamente pelierizadas, cuyas hojas oblongas ó elíptico-oblongae ;^on puntia,uud>is, lisas ú ordinariamente ásperas y pustulosas, por la cara superior lampiña, mientras la inferior tiene solamente sus nervaduras lampiñitas ó pelierizaditas, algo coriáceas ^ largas de 2 1[2". 3 li2", sobre 1 ]í2 ' de ancho y cuyo peciolo tiene solamente 3 ó 6"'" de largo; nervaduras principales 4 yugadas, cuyas superiores salen hacia la parte mediana de la costilla ; amentos lar- gos de 1"" 1[2. A. rugosa, Miq. — A. tricliostachya, Miq. — Piper rugosítm, Lam. 5. Base desigual ó apenas desigual; pedúnculos mas corto.- que el peciolo marjinado, 6. — Base muy desigual ó solamente algo des- igual; peciolos desnudos, 7. 6. Arbusto de hojas ovales ó elípticas , lisas, papiráceas, largas como de 6 á 8 " y anchas de 3 á 5'', con la cara superior lampiña» mientras la inferior tiene sus nervios pubescentitos, nervaduras principales 5-7 yugadas, casi .equidistantes, cuyas superiores salen á alguna distancia del vértice de la hoja: peciolos largos de 8 á 12"': amentos derechos, largos como de unas 2 á 3". A. coriiscans, Miq. 58 DIVISIÓN SECUNDA. — FANERÓGAMOS. 7. Base muy desigual y redondeada ala par; hojas lisas, pedún- culos mas largos que los peciolos, 8. — Base desigual, hojas lisas ú ordinariamente pustuloso-ásperas, pedúnculos mas cortos que los peciolos, 9. 8. Arbusto como de 6" de altura, con hojas ovalohlongas ú ovales, con una punta a;2'uzada, de cara superior lampiña, mientras la infe- rior tiene pelos sobre su nervadura, papiráceas y largas de 3 ó 5'' y de 1 1|2 ó 2 1|2' de ancho: lado esterior de la base prolongán- dose como de 3"" : nervaduras principales 4 , 5 yugadas , alter- nas, cuyas inferiores son aproximadas, mientras las superiores salen á alguna distancia del vértice de las hojas; peciolos largos de 1 á 2"'; amentos de 1 á 3" de largo, ordinariamente derechitos, cu- yos pedúnculos son largos de 4'^ ; cuatro estambres. A. Jamaicensis, Gr. — P¡2)er nitida, S\v. 9. Arbusto de hojas oblicuamente ovales, puntiagudas, lampiñas, pero de nervaduras velludas, membranosas, largas de 4, T' , sobre 2 ó 4'' de ancho, con frecuencia un poco lustrosas ; nervaduras prin- cipales alternas y cuyas superiores salen hacia el medio de la cos- tilla ; peciolo largo de 5 ó 12""; amentos derechos como de 2 ó 4" largos, con flores densamente aproximadas, cuyo pedúnculo tiene -^"^ áe\díY\2:o. P.'hredemeyerl. P. macropliylla. P. ulmifolia, Miq. Plper (mritnni, Sieb. P. düatatum, Rchb. P. Iredemeyeri, Jacc^. 10. Ramitas espesas, pelierizaditas, con pelo largo y deciduo; pedúnculos mas largos que el peciolo desnudo y corto; amentos ar- queados, 11. — Bamitas ásperas, pelierizadas, pedúnculos tan lar- gos ó mas cortos que los peciolos desnudos y sub-cilíndrieos; amen- tos derechos, 12. 11. Arbusto ramoso como de 1 1{2 hasta 2 varas de altura, cuyas hojas ovaloblongas, c^n una punta estrecha por el vértice, y de base muy desigual, son ásperas, papiráceas y largas de 5 á 8^' sobre 4 ó 5" de ancho, con peciolo de 1 á 2"; nervaduras principales 6, 7 yu- gadas, alternas y cuyas superiores salen hacia la parte mediana de la costilla; amentos 2 ó o" de largo y con pedúnculos de 4 ó 5'"". P. adunca, Miq. P. aduiiciim, L.: C. T. Y., párr. 59. 12. Arbusto que á veces se eleva hasta 3 varas de altura, de hojas ovaloblongas ú ovales, con una punta estrecha por el vértice y de base muy desigual, ásperas y papiráceas, largas de 4 ó 10'", sobre 2-3-4" de ancho ; mucho mas pálidas y algo amarillentas ; de nerva- duras principales, 5-6 yugadas, alternas y cuyas superiores salen del medio de la costilla; amentos largos de unas 2 ó 6""" con una punta mas o menos larga y cuyo pedúnculo tiene 2 ó 5"". P. sccibra, Miq.: C. T.Y., párr. 60. — Variedades; hojas sin pelo estendido ; ramitas pelierizaditas cuyo pelo deflexo y deciduo es mas corto que el diámetro del eje. P. sca.l)ra y hirsuta, Miq. — Hojas y ramitas con pelo largo, estendido, articulado y persistente. P. hirsuta. Pij^er hirsutum, Sw. 13. Base de las hojas muy desigual, no se ve en ellas ningún pun- tito transparente, 14. — Base de las hojas igual, con ó sin puntitos transparentes; vejetales lisos y lampiños, 21. 14. Peciolos y ramitas verrugosos; peciolos de márjen alada y DICOTILEDÓNEOS. CLAi^E XVI. — PIPERÍNEAS. 69 mas cortos que los pedúnculos, 15. — Peciolos y ramitas nunca ver- rugotios, pero al contrario lisos, lampiños 6 peludos, 16. 15. Arbolito cuya epidermis está cubierta de verrug-uitas blancas, deprimido-globosas; de hojas grandes oblongas ú ovaloblongas, puntiagudas, de base sub-acorazonada y muy desigual, cuyo lado esterior se prolonga como de 5 á 10"", lisas, lampiñas y coriáceas, largas de 8', 12" y hasta 24"', sobre 4". ó 3" de ancho ; nervaduras principales equidistantes 10 á 12 yugadas; peciolo largo de 2 á 6"''; amentos derechitos ó arqueados de 4 á 6'' largos, cuyo pedúnculo tiene solo 8 ó 12'". P. rerrucosa, Gr. Piper terrucosum, Sw. 16. Peciolos acanalados desnudos y tan largos como los pedúncu- los, 17. — Peciolos nunca acanalados ni desnudos tampoco, mas cortos ó tan largos como los pedúnculos, 18. 17. Arbusto de tallo y ramos con nudos bastante pronunciados y cuyas ramitas lisas y lampiñas llevan hojas oblongas ú oblongo- lanceoladas, aguzadas y rara vez obtusitas, de base muy desigual. lisas, glabras y papiráceas, largas de 8" ó 4, sobre 2 1{2" ó 1 1|2 de ancho; nervaduras principales equidistantes 7 ó 12 yugadas; peciolo largo como de 3 á 5'" solamente; amentos de 3 á 5" de largo. P, (jenicidata. P. xijloirioides , P. xesto'pliyUa. P. staminea, Miq. 18. Peciolos alados por la márjen y tan largos como los pedún- culos, 19. ■ — Peciolos alados y envainadores á la par y mas cortos que los pedúnculos, 20. 19. Arbusto cuyo tallo se eleva como á 12 y hasta 20' de altura, de ramitas lisas que llevan hojas grandes, ovaloblongas, de base re- dondeada ó subacorazonada y muy desigual, puesto que el lado es- terior se dilata como de 10"" ó 5 mas que el otro, lisas, glabras y papiráceas, largas de 12" á 8" sobre 5" ó 4" de ancho, de nervaduras principales 10 ó 12 yugadas, equidistantes ó cuyas inferiores están aproximadas las unas de las otras ; peciolo largo de unas 4 ó 6" : amentos derechos de como 6" de largo. P. macrophylla, Gr. P. las- sertiana. P. macrophylla, Miq. Piper macropliylhim, Svr. P. iuce- quale, H. B. K. 20. Arbusto cuyo tallo y ramos tienen nudos bastante pronuncia- dos, de ramitas lisas, peludas ó lampiñas que llevan hojas oblongas ú ovaloblongas, con una punta obtusita y de base muy desigual con asperidades por la cara superior que parece como verrugosita. mientras la inferior, lisa, es pubescentita en los nervios, papirá- ceas 3^ largas de 5" ó 4", sobre 2", 1 lf2'', raras veces 21 [2" de ancho; nervaduras principales equidistantes 8 á 10 yugadas; peciolo largo de 1 á 2"' y ancho de 2"'; amentos largos de 3 á 4" y con pedún- culo de 4 á 6". P. tuherculnta , Miq. Píper tvJberciilatuní , Ktk. P. Terriicos2'.m, Sieb. 21. Hojas nunca elípticas, de peciolo acanalado, desnudo, tan largo ó mas corto que los pedúnculos, 22. — Hojas mas ó menos elípticas, de peciolo acanalado desnudo, tan largo ó dos veces ma- yor que los pedúnculos, 23. 22. Arbusto cuyas hojas aguzadas y estrechas por la base igual, SOR papiráceas, inequilaterales, largas de 5" ó 3 ' sobre 2" ó 1 dean- cho y con puntitos transparentes diminutos ; de nervaduras princi- 70 DIVISIÓN SEGUNDA. — FANERÓGAMOS. pales 4 ó 6 yii2:adas, sub-equidistantes, de las que las mas interiores están aproximadas las unas de las otras: peciolos largos de 3 á 4" : amentos de 2 " ó 1" largos mientras su pedúnculo lo es de 6" ó 4''. P. Xüostoides, Miq. 23. Hojas solamente elípticas; peciolo tan largo como los pedún- culos, 24. — Hojas tan pronto elípticas como ovales: peciolo dos ve- ces mas largo que los pedúnculos, 25. 24. Arbusto cuyas hojas, largas de 7" ó 5" sobre 3" ó 2 1|2" de an- cho, inequilaterales, pero de base igual, papiráceas y enteramente opacas, se terminan poruña punta estrecha: principales nervaduras equidistantes 6 á 10 yugadas; peciolo largo de 6 á 8""' mientras los amentos lo son de 2"'. P. (eqnalis, Miq. 25. Arbustillo de hojas terminadas por una punta estrecha y de base igual, papiráceas, con puntitos transparentes, frecuentemente nequilaterales, largas de 7" ó 4'', sobre 4 ' ó 2' de ancho y con pecio- los de unas 12'"'; nervaduras principales 5 á 6 yugadas equidistan- tes ó de las cuales las mas inferiores están aproximadas las unas de las otras: amentos largos de 3" á 1, mientras sus pedúnculos lo son de 6'" á 4 solamente. P. martiana, Miq. P. scJuinJn'í , Miq. Ch V. ScJiWeria caydata, Klh.: C. T. Y., párr. 02. CLASE XVn. — URTICINEAS. Familia 38. — ANTIDESMFAS. — Arboles 6 arbustos iner- mes 6 aguijonoíjos , algunas veces trepadores, con hojas alternas simples, pecioladas, coriáceas, cujeas estípulas están apartadas de la base del peciolo y caedizas. Flores en espigas amentiíormes y brac- teadas, unisexuales ;^j cuyas masculinas se componen de un perigo- nio calicinal di, tri ó quinquepartido, con la estivacion empizarra- da; los estambres son 5 insertos en lo mas bajo del perigonio ó iguales en número con sus divisiones y opuestos ó alternos con ellas, cuyos filamentos filiformes libres ó unidos en la base con un disco central glanduloso y mínimo, son mas largos que el perigonio y se terminan por una antera introrsa, bilocuíar, cuyas celdillas, que están separadas ó pegadas en un conectivo horizontal, se abren por una grieta vertical: además hay un pistilo rudimentario sentado en el centro de la fior; las femeninas constan de un periantio calicinal 3 ó 5 partido y caduco, de un pistilo formado de un ovario libre, ceñido por la base de un disco anular, unilocular y cuyos dos hue- vecillos, colateralmente colgantes del vértice de la celdilla, son anátropos ; estigma terminal sentado y deprimido, arrayonado, 3 ó 5 lobo. El fruto consiste en una drupa abayada, coronada por el es- tigma, monosperma por causa de aborto de uno de los huevecillos, cuyo cuesco huesoso esteriormente hoyoso ó punteado echa inte- riormente apéndices que penetran en la semilla inversa y de tegu- mento membranáceo; endospermo carnoso y copioso; embrión orto- tropo con cotiledones grandes y -foliáceos y de raicilla corta y su- pera. Antidesma alexitaria. C. T. Y., párr. 619. Familia 39. — URTICACFAS. — V\six\i^^ herbáceas anuales UICOTÍLEüOísEOS. CLASE XYII. — UKTICINEAS. il Ó vivaces, malas enredaderas ó arbustos, de hojas simples, opuestas ó alternas, pecioladas, enteras ó dentadas, festoneadas ó mas ó me- nos profundamente lobadas, con pelos punzantes ó sin ellos y hasta glabras algunas veces, con dos estípulas caducas situadas hacia la inserción del peciolo que acompañan. Flores monoicas, dioicas y también polígamas , rarísimamente hermafroditas , solitarias ó agrupadas de varios modos j axilares, ó bien en especie de espigas ú de racimos terminales, siempre muv pequeñas y constan de un perigoniü mon()liio cuyo limbo es mas ó menos profundamente 4 ó ó partido: hav tantos estambres cuantas divisiones perigoniales y con los cuales alternan ó son opuestos y en cuyo fundo se insertan ; de filam,entos do])lados durante la estivacion y al abrirse la flor, sa- liendo por fuera con elasticidad: las femeninas son formadas de \u\ periantio con 2 ó 4 sépalos, que algunas veces están reemplazados por una escama en cuya axila está situado el pistilo, que se compone de un ovario único, supero, cuyo estilo simple ó bífido y frecuente- mente lateral suele faltar bastantes veces: estigma ordinariamente con figura de pincel ó bífido, sentado algunas veces, pero las mas terminando el estilo ó sus divisiones. Fruto seco aqueniforme, ave- ces contenido en un cáliz que vuelto carnoso lo hace aparecer aba- yado ; de cuesco crustáceo y quebradizo ; embrión derecho y encer- rado por lo común en el interior de un endospermo mas ó menos delgado. Análisis (licotómica de las trihis con la de las especies. 1. Yejetales provistos de pelo muy punzante y cuya picadura abrasa mucho; hojas opuestas ó alternas, 2. — Perigonio de las flo- res femeninas contraído por el vértice 2, 4 dentado ó entero y que á veces suele faltar: pelo nunca punzante; tallos siempre leñosos. T. I. BOEHMERIEAS, G. IV. 2. Divisiones calicinales de las flores femeninas desiguales; algu- nas veces vejetales lampiños : de hojas opuestas. T. II. Urereas. G. I. — Flores femeninas cuyo periantio es ordinariamente 3 par- tido ; estigma apincelado; ordinariamente plantas herbáceas siempre mas ó menos punzantes; de hojas opuestas. T. III. Procrideas. G. I. Urtibaca, de Gy. Urera, Gaud., 1. — Cimas cuyos pedún- culos son dos ó tres veces dicótomos ; rafidias ó venas visibles por la cara superior de las hojas ó nulas, 2. — Cimas cuyas flores aproxi- madas forman una especie de espigas ramosas ó simples, hojas con muchas rafidias ó venas lineares visibles por la cara superior, 7. 2. Aquenio saliendo por afuera de la baya calicinal, 3, — Aque- nio enteramente encerrado en la bava calicinal, 4. 3. Arbusto como de 6' hasta 12' de altura, muy aguijonóse, mas ó menos ramoso y erguido ó derecho, con hojas grandes ovales ó redondeaditas, sinuoso-dentadas, largas como de 6 á 12", con puaa largas, rojizas, las cuales se hallan también en los peciolos, pedún- culos, pedicelos y ramitas, largamente pecioladas; cimas laterales las mas veces tricótomas y abiertas cuyas flores son pediceladas. '72 DIVISIÓN SEGUNDA. — FAXER0(.^AM08. U. laccifera, de Gy. U. laccifera, Gaud. Urtica laccifera, L.: C. T. V.,párr.21. 4. Hojas festoneado-aserradas y pubescentes ; cimas las mas ve- ces esparramado-dicótomas, cuyas flores femeninas son pediceladas, 5. — Hojas festoneadas, raras veces sinuoso-sub-enteras, lampiñas, cimas á veces esparramado-dicótomas, cuyos últimos brazos de las femeninas son ñliformes y cargan con 3 á 7 flores sentadas, 6. 5. Arbusto ó arbolito con hojas anchamente ovales, ordinaria- mente un poco acorazonadas por la base, sin púas, cuyas superiores tienen como 3 á 4" de largo y casi un tanto de ancho, mientras las inferiores son frecuentemente largas de mas de 1',' con las nervadu- ras principales 6 á 8 yugadas; cimas axilares ó laterales. U. caracal- sana, Gand. U. Jacqv.ini, AVedd. Urtica camcasana, Jacq. Z7. ces-^ tuans, Sieb. 6. Arbolito bajito que se eleva á unos 15 ó 20' de altura ó menos, de hojas ovales ó aovaloblongas, con una punta, recortadas por la base como de unas 4 á 6" de largo, sobre 2 á 3" de ancho : cimas axilares ó laterales. U. elata, Gr. ü.sinuata, ^N^edd. Urtica ela- ta, Swtz. 7. Hojas triplinervias, espigas femeninas ramosas y mas cortas que el peciolo, 8. — Hojas trinervias; aquenio saliendo por fuera de la baya calicinal, 9. 8. Mata con hojas ovalo-redondas, obtusitas, festoneadas ó sub- enteras y de base redondeada, glabras ó alampifiadas por la cara in- ferior; flores en racimos axilares. Z7. crassifoUa, AYedd. 9. Flores de ambos sexos en espigas ramosas mas largas que los pe- ciolos, 10. — Espigas simples apenas tan largas como los peciolos, 11. 10. Arbusto ó arbolito de hojas elíptico-oblongas con una punta obtusa por el ápice, redondeadas ó acuñadas por la base, festoneadas ó sub-enteras con las nervaduras de la cara inferior glabras ó alam- píñadas, largas de 4" á 3" sobre 2" ó 1 1^2" de ancho, membranáceas. U. microcarpa, Wedd. 11. Mata con hojas oblongas ó elíptico-oblongas, obtusas y sin embargo con una punta, recortadas por la base, repando enteras y lampiñas, de como b" ó 2" largas sobre 2" á 1 1[2" de ancho, papirá- ceas ; peciolo corto ; flores en racimos axilares, sub-sesiles. U. sjn- cata, Wedd. G. II. PiLEA, Lindl, 1. — Hojas pequeñas numerosas : ta lo des- parramado y blandito ; flores andrójinas, 2. — Hojas de tamaño regular ó á veces bastante grandes, 3 ó 5 nervias, 5. 2. Hojas obovaloredondas, entegerrimas, de cara superior, con venas lineares y mas veces transversales, 3. — Hojas acuñadas ó lanceoladas, cuyas mas largas son aserradas mientras las menores son ordinariamente enteras ; de nervios oblicuos y lineares, visibles por ambas caras, 4. 3. Tallo ramoso anual ó sofruticoso, á veces suculento, con hojas apareadas, cuyas menores parecen una estípula grande ; cimas con- traidas, mas cortas que las hojas y ordinariamente andrójinas. P. microphylla, Lieb.: C. T. V., x^árr. 354. 4. Planta herbácea bastante varialde, delicada y á veces sofruti- DICOTILEDÓNEOS. í.'LA.SE XVII. — L'KTICÍNEAS. 73 cosa, glabra ó alampiñada, con hojas heteromorfas ; cimas diminu- tas, contraidas, pedunculadas, mas veces andrójinas, cuyo pedúnculo es casi tan largo como las hojas. P. Incida, Bl. P. Cuberisis, Wedd. L^r tica lucida. U. cuneifolla. U. serratulata, Swtz. C. T. Y. 354. 5. Bien enteras; cimas mas cortas que ellas; tallo derecho simple ó algo ramoso, un poco estrechado ó contraído hacia los nudos; ve- jetales por lo común lampiños, 6. — Hojas siempre mas ó menos aserradas, 11. 6. Hojas linear-lanceoladas ó solamente lanceoladas con venitas desparramadas por ambas caras y lineares; flores dioicas, "7. — Ho- jas elípticas ó elíptico-lanceoladas, ovales ú ovalo-lanceoladas, 8. 7. Tallo derecho y erguido como de 1 á %' de alto , con hojas aguzadas, 3 nervias y perfectamente enteras, cortamente pecioladas, largas de 1 1{2 á 2 ll2"; cimas masculinas contraidas y cuyos pe- dúnculos son 2 á 3 veces mas largos que las hojas: mientras que las ñores femeninas se hallan en espigas interrumpidas, subsesiles y tan largas como los peciolos. P . nudicavMs, AVedd. Urtica nudicauUs, Swtz. U. lanceolata, Poir. 8. Elíptico lanceoladas ó elípticas, enteras ó repandas, cuyas ve- nitas se presentan por la cara superior bajo forma de puntitos ; flo- res dioicas, 9. — Ovales ú ovalolanceoladas ; venitas lineares visi- bles solamente por la cara inferior; flores andrójinas ó unisexua- les, 10. 9. Matita de tallo de 2 á 6' de altura, sofruticoso y ramoso desde la parte inferior, con hojas cortamente aguzadas, acuñadas ó redon- deadas por la base, trinervias, ordinariamente glabras por la cara superior, mientras la inferior es pubescente ó lampiña en las ner- vaduras, apareadas y desiguales; la menor es oval, las mayores tienen como 2'' ó l'^de largo, sobre 8'" á 5" de ancho, mientras las menores son largas solo de G'"" á4' ; cinias masculinas contraidas, diminutas, cortamente pedunculadas y ordinariamente mas cortas que el peciolo delgadito de las hojas; las femeninas al contrario son desparramado-abiertas, subsesiles y tan largas como los pecio- los.! i^. ^;rtr?>íríWrt, Bl. P. riveria. Weáá. Urtica pariet aña, L. : C. T. V.,pár. 353. 10. Yerba con hojas aguzadas trinervias, de cara superior pelu- da, mientras la inferior es pestañosa y pubescente á la par, á veces lampiña por los nervios, largas de 1 1|2 ó 5"', sobre 1 1|2 ó 2" de an- cho: cimas estendidas, pedunculadas y casi tan largas como el pe- ciolo alargado de las hojas. P. ciliaris, Wedd. 11. Tallo mas ó menos fruticoso y rara vez herbáceo, derecho v nunca jamas rastrero ni desparramado al suelo tampoco, 12. — Tallo blando y las mas veces herbáceo, ordinariamente rastrero, con los ramos herbáceos y ascendentes, 25. 12. Erguido, simple ó ramoso inferiormente; hojas lampiñas y casi iguales,. 14. — Erguido, siempre ramoso y sofruticoso; hojas desiguales pelitiesas, 13. 13. Matita como de T de .alto, cuyas ramitas pelitiesas son de color mohoso ; hojas elípticas ó elíptico-lanceoladas, con una punta, de dientes como cortantes, largas como de 18"' á 8'". sobre 8"' á4'" de 74 DIVISIÓN SKGTINDA. - lAN EROGAMOS. ancho ; las menores al contrario tienen solamente 4 ó 2'" de largo, con pelo tieso y esparcido, triplinervias, con venas lineares mas pronunciadas j mas gruesas por la cara, superior que por la infe- rior; estípulas como redondas, abiertas, membranáceas, de color mohoso y persistente ; cimas andrc3jinas, espigadas y apenas mas largas que las estípulas. P. rufa, ^Yedd. Urtica rufa, Swtz. 14. Cimas cortamente pedunculadas y contraidas, 15. — Cimas largamente pedunculadas, desparramadas y esertas, 18. 15. Flores dioicas; hojas lijeramente aserradas hasta cerca del vértice y cuyos dientes son truncos: venitas lineares y visibles por ambas caras, 16. —Flores monoicas; hojas aserradas hasta mas allá de la parte mediana y cuyos dientes son puntiagudos: venitas linea- res visibles, especialmente por la cara superior, 17. 16. Yerba como de T, glabra y con hojas lanceolado-oblongas, puntiagudas, algo redondeadas por la base, largas de 2 á 3" y an- chas de 12 á 18'"'; triplinervias y cortamente pecioladas; cimas con- traidas y dos veces mas cortas que el peciolo de las hojas, el cual es delgado y de 4 á 8"' de largo; las flores masculinas están en co- rimbos ramosos y las femeninas en espis-as, de nedúncuios cortos en ambas clases. P. reticulata, Wedd. 17. Yerba como de 1', un poco áspera, cuyas hojas inferiores son alternas, mientras las superiores son opuestas, lanceolado-elípticas con una punta, acuñadas por la base, trinervias, algo espesitas, lar- gas de 2 á 3", sobre 18 á 10'" de ancho, cuyo peciolo tiene 1" á V 1[2 de largo; cimas contraidas, diminutas y cuatro veces mas cortas que el peciolo delgado y algo dilatado por el vértice, subse- siles é inferiores, mientras las masculinas, caulinares ó axilares son superiores: en el fondo del perigonio hay un nectario ciatiforme. P. sessiliflora, Weddi Urtica sessiflor a, Swtz. U. variegata, Sprg. 18. Tallo subfruticoso; cimas abiertas y estendidas, 19. — Tallo subfruticoto mas ó menos suculento v herbáceo: cimas abiertas y estendidas, vejetales lampiños, 22. 19. Flores siempre dioicas y en espigas interrumpidas: hojas gruesamente festoneadas, enteras por la base, con venitas pequeñas visibles por ambas caras, 20. — Flores dioicas y raras veces monoi- cas, casi espigadas: hojas gruesamente festoneadas, cuyas venitas son visibles por ambas caras, 21. 20. Mata de como 3 á 4' de altura, lampiña , cuyas hojas oblongo- lanceoladas, lanceoladas ó elípticas, aguzadas y 3 ó 5 nervias, son largas de 5" á 2", sobre 24'"" á 8'" de ancho, redondeadas ó algo aco- razonadas por la base, con dientes agudos; estípulas oblongo-lan- ceoladas, largas de 4'" ; cimas tan largas ó mas que los peciolos^, formadas de espiguitas del tamaño de un guisante y hasta menor. P. densifiora, Kth. 21. Yejetal de unos pies de altura, lampiño y con hojas grandes ovales provistas de una puntita, ordinariamente algo acorazonadas por la base, triplinervias ó trinervias, cujos dientes son obtusos, largas de 6'' y anchas de 3", con peciolo de 2": estípulas oval- oblongas y largas de 10"'; cimas mas largas que los peciolos y mas cortas que las hojas. P. granáis, \Yedd. Urtica grandifolia, L. DICOTILEDÓNEOS. CALASE XVII, — URTICÍNEA.S. 75 22. Flores dioicas en cimas estendiclas ; hojas diminutamente re- pando-aserradas hasta mas alhl del medio, con venitas visibles por la sola cara superior, 23. — Flores monoicas, cujas masculinas son como en especie de cabecita; hojas repando -aserradas, con la base entera y cuyos dientes son obtusos v estendidos: venitas linea- res visibles por la cara superior, 24. 23. Yerba de 1" con hojas lanceoladas, cuyas inferiores menores son elípticas, todas aguzadas, triplinervias, largas de 3 á 4", sobre 20''"' á 8 de ancho, callosas por la márjen : cimas largamente pe- dunculadas, casi tan largas como las hojas, de las cuales las feme- ninas tienen muchos brpczos filiformes. P. semidentata, "Wedd. Í/V- tica semidentata, Poir. 24. Yerba como de 1', cuyas hojas oval-obloiigas y con puntitos ó cortamente aguzadas son triplinervias, largas de 3 á 4", sobre T' á 1^' 1{2 de ancho, redondeadas y algo acorazonadas por la base, cuyo peciolo es dos veces mas largo que las estípulas oblongas, deci- duas y largas de 2 á 3'"; cimas largamente pedunculadas y casi tan largas como las hojas, cuyas masculinas contraidas están partidas, mientras las femeninas tienen muchos lirazos. P. fioudotio/iia, AVedd. P. elegans, "\Vedd. 25. Cimas recojidas, 26. — Cimas estendidas y desparrama- das, 41. 26. Subsesiles, 21. — Algo ramosas y pedunculadas, 34. 27. Flores dioicas, 28. — Flores andrójinas, 29. 28. Yerba cuyo tallo de 3 á 4" de largo, rastrero y arraigante, algo anguloso y estriado, lampiño y suculento, con ramitas cortitas y escondiditas en los céspedes, lleva hojas opuestas acuñadas y or- biculares á la par, festoneadas por debajo de la parte media, triner- vias, glabras, dobles, algo suculentas y de como 4"' de ancho, mo- reno-verduscas, estípulas ovales persistentes, situadas entre las hojas y semi-abrazadoras, pequeñas y blanquecinas' venitas linea- res situadas por debajo y cerca de la márjen de la cara superior, cuyas marjinales son diminutas y puntiformes : flores terminales y saliendo de entre las hojas. P. depressa, Bl. Urtica depressa, Swtz. 29. Tallo rastrero, arraigante y peludo, 30. — Tallo trepador, arraigante ó á veces rastrero por la base y ascendente, 31. 30. Yerba de tallo bastante largo, filiforme y estriadito, ramosito y con hojas orbiculares, festoneadas como hasta en medio^ nervoso- venosas por ambas caras, largas de 6'" á4'", sobre 6'" á 3'" deancho, cuyo peciolo es casi tan largo como ellos; las ramitas son opuestas y se terminan por un verticilo de 4 hojas que contiene las flores; estípulas opuestas, pequeñas y blanquecinas; en las flores femeninas cuyas divisiones pexigoniales son pestañosas hay en el fondo" un nectario ciatiforme diminuto. P. mimmularifolicí, ^Vedd. Urtica monmídaH/olia, Swtz. : C. T. Y., par. 352. 31. Tallo trepador ó arraigante cuj'os ramos no son nunca as- cendentes, 32. — Tallo no trepador, pero de base rastrera, arrai- gante y cuyos ramos son ascendentes, 33. 32. Yerba cuyo tallo elongado, glabro, cilindrico y algo suculento 76 DIVISIÓN SEfxUNDA. — FANERÓGAMOS. tiene ramas opuestas que cargan, con hojas ovales ú oval-oblon- gas, obtusas, acuñadas por la base entera, obtusamente aserradas, lisas y lustrosas, con solo 3 á 4 dientes por cada márjen, tripliner- vias, largas de í^'" á 4'", sobre 3'" ó 2'" de ancho y cortamente pe- cioladas ; venitas lineares en la cara superior, mientras las de la cara inferior son puntiformes y apenas visibles : estípulas diminutas ; flores subsesiles y pocas. P. radicans, Wedd. Urtica radicans, Swtz. 33. Yerba alampiñada con tallo elongado de como C de largo, cuyos ramos opuestos y subdivididos cargan con hojas opuestas, ovales con una punta, dentado-aserradas, de base acuñada y ente- ra, trinervias, con pelo esparcido por los nervios, cuyas venitas poco notables y por fin lineares, son visibles por ambas caras ó puntiformes por la superior, largas de 18" á 8', sobre 2 á 4"' de an- cho, pestañosas y cuyo peciolo delgadito j pubescente tiene 4 á 8"' de largo: estípulas mínimas, conadas, amplexicaules y supra-axila- res ; divisiones perigoniales pestañosas en las flores masculinas. P. Swartzü, Wedd. ü. ciliata, Swtz. 34. Tallo rastrero arraigante, 35. — Tallo nunca rastrero ni ar- raigante tampoco, 38. 35. Peludo ólampiñito; hojas ovalo -redondas, festoneado-aser- radas, con la base entera y trinervias, 36. — Lampiñito cuya base sola estio rastrera y arraigante, mientras la parte superior es ascen- dente; hojas ovalo-red ondeadas y obtusamente aserraditas hasta mas allá de en medio, 37. 36. Yerba raras veces alampiñada, alta de como unas 6 á 8'\ cu- yas hojas largas de 10"' á 6"' y de 8''' á 4'" de ancho, con frecuencia tan largas como anchas, con pelo especialmente en los nervios de la cara inferior, raras veces alampiñadas, nervios laterales arqueán- dose por debajo del medio del limbo; estípulas anchamente oblon- gas, estendidas y persistentes, cimas andrójinas y raras veces uni- sexuales contraidas ó con algunos brazos, cuyos pedúnculos igualan al peciolo ó á las hojas mismas. P. nummularia, Gr. P. re;pens, Wedd. U. refens, Swtz. 37. Yerba de tallo desnudo inferiormente, simple, corto, delica- do y con hojas trinervias, de cara inferior lampiña y verdemar, mientras la superior tiene pelo transparente y poco, ó es alampi- ñada, membranosas, con tres dientes por cada márjeñ, venitas li- neares visibles, especialmente por la cara inferior, agrupadas cerca de la márjen 3" desapareciendo en medio del disco; peciolo largo de 6'"ál'"; estípulas redondeadas, pequeñas y persistentes; cimas unisexuales, con pedúnculo igual al peciolo ó á las hojas mismas; las masculinas son glomeruliformes y peludas. P. rotundata, Gr. 38. Flores andrójinas en cimas contraidas ó poco ramosas, 39. — Flores dioicas, cuyas cimas masculinas son contraidas y las femeni- nas estendidas y con pocos brazos, 40. 39. Yerba de tallo corto y desnudo inferiormente y cuya parte superior ó ascendente, larga de 2 á 6", peluda ó alampiñada, carga con hojas ovales provistas de una punta, gruesamente festonead 0- aserraditas, de base entera, trinervias, lampiñas ó con algún pelo DIÍ'OTlLEDONEOf. (LA.SE XMi. — LKTíClNEA.S . // transparente, j largas de 1|2" ó 1" 1[2, sobre 4'" á 14"' de ancho: venitas lineares visibles por ambas caras, con peciolo largo de 10 á 12'"; estípulas ovales, obtusas j persistentes, largas de 1'"; cimas axilares en las hojas superiores é iguales con los pedúnculos. P, iiKEquaíis, "Wedd. 40. Planta herbácea alampiñada, cuyo tallo de 5" á 1^2" de alto, es ramoso inferiormente, lampiño y ascendente por el vértice, con hojas ovales con una punta, grosera y agudamente aserradas, de base entera, trinervias y largas de 3 á 1[2", sobre 24 á 3'" de ancho^ opuestas ypecioladas; venitas lineares visibles por la cara supe- rior; estípulas anchamente oblongas y persistentes ; pedúnculo de la cima largo é igualando al peciolo ó á las mismas hojas termina- les y de cuya axila sale. P. lacen,, AVedd. Urtica Icixa, Swtz. 41. Pedunculadas y andrójinas, 43. — Sésiles y también andróji- ñas, 42. 42. Yerba detallo largo de 12 á4", lampiño, erguido, con hojas oval-redondas con una punta ú obtusas, aserradas, con la base en- tera, trinervias, lampiñas ó con algún pelo transparente y situado por su cara superior; largas como de 1'" y frecuentemente mas cor- tas que el peciolo; venitas lineares visib]es por ambas caras; estípu- las mínimas; cimas formando verticilos sentados y mas cortos que los peciolos; aquenio diminuto, oval y obtuso. P. hyalina. Fzl. Ur- tÍGo.'pií'inila. Euph. C. T. Y. 354, 43. Tallo sofruticoso y leñoso dicótomo, 44. — Tallo mas ó menos herbáceo v nunca leñoso, 45. 44. Mata lampiña cuyos ramos desparramados, largos de como 2' poco mas ó menos y herbáceos, cargan con hojas ovales provistas de una punta ú obtusas, aserradas y de base entera, alampiñadas ó pubescentitas á lo largo de los nervios de la cara inferior, opuestas, largas de 12 á 18'" y pecioladas; estípulas estraxilares , semi- abrazadoras, bífidas y de márjen arrollada hacia afuera, venitas li- neares visibles por ambas caras: cimas ombeiiformes, cuyos pedún- (ailos son ordinariamente tan largos ó algo mas que las hojas superiores, de cuya axila salen. P. difusa, AYedd. Urtica difusa, Sw. 45. Tallo peludo, rastrero y arraigante por la base, desnudo, de vértice ascendente y con hojas, 46. — Tallo peludo ó alampiñado no arraigante, cuyos ramos son ascendentes y herbáceos, 47. 46. Ovales de vértice redondo, obtusamente aserradas y de base entera, 3 ó 5 nervias, con la cara inferior lampiña, mientras la su- perior tiene pelo esparcido y transparente, membranosas, largas de l6 á 12"', sobre 12 á 6'" de ancho, pestañosas, 3 á 5 nervias ; venitas por la cara inferior ; estípulas anchamente oblongas, obtusas y per- sistentes ; cimas piramidales cortamente pedunculadas, cuyos pe- dúnculos son casi tan largos como los peciolos ; aquenio diminuto oblicuamente oval redondeado. F. ovalis, Gr. 47. De hojas grandes ovales con una punta ú obtusas, largas de 3 á 2", gruesamente aserradas y enteras por la base sub-acorazo- nada ó anchamente acuñada, 3 nervias con venitas chiquitas linea- res y visibles por ambas caras ; estípulas largas de 4 á 2'", estendi- 78 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. das Ó persibtentes ; cimas coriinbiformes y apanojadas á la par, anchamente pedunculadas y ordinariamente igualando alas hojas. P. puhescens, Lieb. P. (l\fusa, Gr. P. furcata, Lieb. P. aov/íiútia- ta, Lieb. P. grossecrenata, Miq. Urtica inxolucrata, Sims. U. gran- di folia, Swtz. G. III. Urtica, L. — 1. Florete dioicas, '2. — Flores monoicas ó andrójinas, 5. 2. Ak'ima vez que otra sin tallo, 3. — Siempre con un tallo er- guido, 4. 3. Yerba. cuyo tallo, cuando existe, es cortito, de hojas ordina- riamente radicales, anchamente pecioladas, erguiditas , oblongas, aguzadas, un poco aserradas, nervioso-venosas, alguna vez que otra ásperas, pubescentes ; estolones cauliformes rastreros, cilindricos, simples, saliendo de la raíz del lado de las hojas y que llevan hojas opuestas, sub-redondas, oblongas, dentadas, nerviosas, veludo pu- bescentes y algo rizadas ; estípulas situadas hacia la base de los pe- ciolos, abrazadoras, oblongas, enteras y membranáceas: pedúnculos saliendo del centro de las hojas radicales, mas largos que ellas, fi- liformes erguidos y lampiños: flores masculinas en cabecita con- traída, mientras las femeninas son en cimas estendidas y formadas de flores diminutas; aquenio obloni^o. U. stolonifera, Swtz.: C. T. V., par. 352. . 4. Planta herbácea de hojas opuestas, aspadas, pecioladas, oblon- gas, angostadas por ambos estremos, obtusas aserradas, 3 nervias, con venas rugosas situadas hacia la márjen, alampiñadas y pelitie- sas por los nervios y las venas, cuyos peciolos algo comprimidos son pelierizados : estípulas ovales situadas entre las hojas; flores mas- culinas apretad as, .diminutísimas y dispuestas en racimitos termi- nales estendidos y mas cortos que las hojas, mientras las femeninas son en cabecitas. U. rugosa, Swtz. 0. Planta lampiña, 6. — Planta alguna vez que otra lampiña, pe- ro con mayor frecuencia pubescente, 7. 6. Como de 1' de alto, cuyo ramos amanojados, himples, cilindri- cos y quebradizos están acompañados de estolones larguísimos, filiformes y saliendo de la base ; hojas pecioladas, opuestas acorazo- nadas y redondeadas á la par, aserradas, 3 nervias, venosas y lam- piñas, de peciolo largo algo cilindrico y lampiño, mientras las que salen de los estolones son cortamente pecioladas y orbiculares, con estípulas opuestas, oblongas, blanquecinas, enteras y situadas entre las hojas ; flores en racimos pedunculados, terminales, casi apano- jados, diminutísimos y blancuzcos, cuyos pedicelos y perigonios son de color rojizo. U. betv.lcBfolia, Swtz. 1. Yerba cuyos tallos desparramados y ramosos son cilindricos, lampiños ó pubescentes, con ramo- y ramitas estendidos, rastreros y pubescentes; hojas alternas pecioladas, las terminales son un poco verticiladas por á tres ovales, tan anchas como largas y de 1|2"' de diámetro, algo mas anchas por la base, integérrimas y aguzadas, con el peciolo corto y pubescente; las de los ramos son blancas y velludas ; estípulas laterales ; flores diminutas apretadas en medio de las hojas terminales, cuyas masculinas en cimas piramidales, de ('LAS.E XVil. — UKTICÍístíAS, DlCOTlLEDONiiOS. "O perigonio con cuatro divisiones pestañosas y estrechitas, pelitiroji- zas, tienen en el fondo de aquel un nectario ciatiforme diminutísimo y con el rudimento del pistilo; mientras las femeninas en cabezas sentadas y verdes están acompañadas de dos brácteas mínimas mem- branosas y situadas por debajo del porig'onio ventricoso que tiene solamente 2 á 3 divisiones valvares ; estigma filiforme y deciduo. U. lapulacea, Swtz. Rousselict lapulaceo., Gaud. G. IV. Boehmena, Jacq. 1. Flores dioicas, 2. — Flores monoicas ó andrójinas, 3. 2. Arbusto de 3' hasta 10' de altura, cuyo tallo derecho, simple ó algo ramoso, cilindrico, estriado y verrugoso hacia el vértice que corresponde con las hojas desprendidas y es pelitieso; hojas agru- padas hacia la sumidad de los tallos y de las ramas opuestas, gran- des, ovales ó lanceoladas, estendidas , aguzadas, nervicso-venosas, festoneado-aserradas, de cara inferior pelierizada, mientras la su- perior es áspera, largas de 10 á 6", largamente pecioladas ; estípu- las distintas: flores en espigas axilares, laterales y situadas algo por debajo de las hojas, terminales, larguísimas, colgantes y for- madas de grupitos algo redondos y aliernatívamente interrumpidos por brácteas lanceoladas, membranáceas aleonadas y deciduas: tales espigas son tan largas ó mas largas que las hojas ; flores femeninas desnudas ; aquenio sub-redondo y comprimido á la par. B. caiulata, Swtz.: C. T. V. 69. 3. Hojas opuestas, 4. — Hojas alternas, 5. 4. Planta herbácea ó sofruticosa, alta de 2' á 3' algo mas ó menos, de tallo derecho y erguido, estriado, alguna vez que otra ramoso; con cuatro caras, acanalado y lampiño, cuyos ramos opuestos, er- guidos y estriados llevan hojas'raras veces alternas, ovales ú oblon- go-lanceoladas, aguzadas, festoneado-aserradas, aspadas, peciola- das 3 nervio-venosas, alanipiñadas y lustrosas por la cara superior; estípulas distantes. Flores en espigas axilares, ordinariamente sim- ples, frecuentemente con brácteas hasta el vértice, andrójinas y formadas de grupos unisexuales, cuyos masculinos son paucifloros y ca&i sentados, mientras los femeninos multifloros é imÍ3ricados se hallan hacia la base de la hoja floral. B. cylindrica, Wedd. B. lit- toralis, Swtz. Urtka cyliiidrica, L. U. reticulata, Swtz. 5. Mata sofruticosa ó herbácea ; estigma deciduo, 6. — Arbusti- 11o; estigma persi;stente, 7. 6. Pubescente de unos 2', algo mas ó menos, de altura, cuyo ta- llo, erguido, cilindrico, 'estriado, pelitieso y ramoso, lleva hojas ovales aguzadas, dentado-aserradas, nervioso-venosas, ásperas y pelierizadas por la cara superior, mientras la inferior es pelitiesa solamente, con peciolos larguitos, inclinados, estriados y ];ubescen- tes; estíi)ulas laterales. Flores femeninas desnudas, aqueiio dimi- nuto, cónico y negro. B. liirta, Swtz. B iirticifolia, Pers. Phenaúc urticifolia. Pli. lar ¡gata. Ph. Ilaitensis, Wedd. 7. Arbustillo cuyo tallo liso se eleva á unos 5' ó 7' de altura, con ramos alternos poco ramosos, cilindricos y en varita, estendidos y reclinados, pubescentes y estriados; hojas oblicuamente aovado- oblongas (> lanceolado-oblongas, aguzadas por el vértice y festo- 80 DiVlsloN r?E(TL.NDA. — FANEKÓ(t.á MOS. neado-aserradas por la base, ásperas, algo pubescentes ó alampiña- das, desiguales de tal suerte que las unas son largas de 3" á 12", mientras ías otras lo son solamente de 1" á 5", 3 nervias y venosas, con peciolo cuya lonjitud varia mucho, cilindrico y pubescente. Flo- res monoicas en racimitos laterales ó axilares, cuyas masculinas in- teriores salen de la axila de las hojas inferiores ó se hallan agrupa- das en las ramitas desprovistas de hojas, cortamente pediceladas y 3 andras, mientras las femeninas desnudas y acompañadas de brác- teas son mas ó menos numerosas y superiores ; aquenio oval com- primido V marjinado. B. ramifiora, Jacq. Fariútia 39. — ARTOCARPACEAS. — Arboles ó arbustos? frútices, ó matas las mas veces lechosos, de hojas simples alternas o dísticas, pecioladas, enteras, aserradas, pinatífídas, palmatilobas ó peltado-digitadas, con una ó con dos estípulas libres, axilares ó algo laterales y caducas. Flores monoicas ó dioicas, con los estambres erguidos en la yema, dispuestas en cimas apanojadas, en racimos, en espigas ó en especie de cabeza, y muchas, agrupadas en un re- ceptáculo cóncavo, cilindrico ó plano, á veces vuelto una especie de involucro. Las masculinas constan de un perigonio de dos hasta seis divisiones, cuya estivacion es empizarrada y rara vez valvar, casi nunca abiertas y de tantos estambres como divisiones perigoniales hay, alguna que otra vez se hallan en número menor, insertos por la base del perigonio y opuestos á sus divisiones, con filamentos er- guidos, libres, rara vez soldados entre sí, cuyas anteras, erguidas ó inclinadas introrsas ó estrorsas son biloculares y se abren por una grieta lonjitudinal. otras veces uniloculares peltadas y con dos la- minitas sueltas que acompañan su abertura ; las femeninas al con- trario, se componen de un periantio tubuloso, entero, de base algo desviada, otras veceg con tres á cinco divisiones que parecen raras veces como hojuelitas mas ó menos retiñidas entre sí: suelen faltar alguna vez que otra; pistilo formado de un estilo simple, terminal () escéntrico, que se termina por un estigma filiforme espatulado, peltado ó apincelado, otras A'eces dentado, bífido ó bidentado, y por fin rarísima vez trífido ; ovario libre ó infero unilocular y casi nunca biiocular ó trilocular, de celdas monospermas con huevecillo basilar y ortótropo ó parietal ; otras veces colgante del vértice de la celda y entonces anátropo ó campilótropo. Fruto encerrado en el perigo- nio persistente pergamináceo ó drupáceo, otras veces agrupadas las semillas en un involucro carno.so, y en ese caso abayado: mas raras veces en cono capsular que se abre en dos ventallas : semilla tínica con testa membranácea, cuyo embrión, incluso en el eje del endospermo o con mayor frecuencia exalbuminado ó sin endospermo, es iiomó- tropo, antítropo, ó poj' fin anfítropo; radícula superior. Análisis dicotómica de las tribus. 1. Flores femeninas muchísimas agrupadas sobre un receptáculo, 2. — Flores femeninas pocas ó algunas solamente agrupadas juntas sobre un receptáculo apenas pronunciado, 3. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XV II. — URTICÍNEAS. 81 2. Siempre muchísimas ñores femeninas agTupadas densamente sobre un receptáculo globoso ú oblongo, algunas veces mezcladas con las masculinas, liuevecillo péndulo ó colgante. T. I. Euakto- CÁEPEAS. — Muchas flores femeninas agrupadas sobre un receptá- culo llano ó algo cóncavo j provisto esteriormente de escamas em- pizarradas, pero las mas veces solitarias : huevecillo colgante. T. II. Olmedíeas. OlmecUa Cv.hensis. Castüloa elástica. Cav. 3. Flor femenina única, rarísima vez hay dos flores soldadas con el receptáculo ó con el involucro; huevecillo colgante. T. III. Bro- siMEAS. — Siempre mas de una y mas de dos flores femeninas reu- nidas, 4. 4. Huevecillo sublateral semianátropo : estigma discoideo y pel- tado á la vez ; flores femeninas apanojado-cimosas y mas raramente agrupadas hacia el ápice de los pedúnculos segundarios. T. lY. PouROüMEAS. — Huevecillo único, erguido, inserto hacia la base de la celda; estilo corto cuyo estigma sencillo capitado y á la par aiflncelado es alguna vez que otra lateral ; flores femeninas en espe- cies de amentos amanojados. T. Y. Coxocefaleas. T. I. Euartocárpeas. G. I. Artocaojms, — 1. Hojas mas ó menos pinatífidas, muy grandes, 2. — Hojas enteras no muy grandes, 3. 2. Árbol muy corpulento y grande, cuyos ramos, muy gruesos, muy largos y desnudos, se van ramificando hasta volverse ramitas cuyo vórtice inclinado lleva hojas cortamente pecioiadas, largas de como r 1|2 ó menos, sobre 6" á 8" de ancho, sinuoso-pinatíndas \ algo redondeadas, ásperas y cuyos lóbulos enteros y oblongos tienen una punta; hay dos estípulas lanceoladas, grandes, por afuera ve- lludas y caedizas ; perigonio masculino bífido : estilo bi ó tripartido; fruto formando una especie de sincarpio carnoso bastante grueso, con ó sin Depitas que parecen castañas. A. incisa, L.: C. T. Y., par. 201. 3. Árbol muy parecido al precedente del que difiere por sus ra- mos no tan estendidos, por sus hojas enteras oval oblongas ó elípti- cas con una punta 3^ mucho mas pequeñas, de cara superior lisa, lus- trosa y verde oscuro, mientras la inferior mas pálida lleva pelo ; por sus ramitas y pedúnculos peludos y por el fruto largo y mucho mas grueso: perigonio masculino Impartido : estigma simple. A. integri- /oUa,L.: C. T. Y., par. 202. G. II. — TfopMs americana, L.: C. T. Y., par. 165. T. III.Brosimeas.G. III. Brosimmn. — 1. Árbol grandísimo cuvo tronco picado deja chorrear con abundancia una leche comestible y nu- tritiva. B . galactodendron,lsX\\.\ C. T. Y., par. 204. — Arbolesno tan grandes y cuya leche no es tan abundante ni comestible tampoco, 2- 2. Hojas enteramente lampiñas con doce venas principales sa, liendo de cada lado de la costilla, 3. — Hojas de cara superior lus- trosa, mientras la inferior es pubescentita y de color mohoso, con ocho venas principales saliendo de cada lado de la costilla, 3. 3. Árbol bastante alto y corpulento cuyas hojas oblongas ó díp- tico-oblongas tienen una punta ó una puntita largas de 3 á 6"; pedí- celos tan largos como el peciolo y el diámetro de los amentos, que es 82 • DIVISIÓN sectUnda. fanerógamos. de 2 á3'"; fruto globoso de 10 á 12'" de diámetro solamente. B. aUcastmn, Swtz.: C. T. V., par. 203. 4. Árbol mas bajito; con hojas oblongas ú oboval-oblongas, con una puntita y largas de 2 á 3" ; amentos cortamente pedunculados é igualando casi los peciolos. B. m'Metii, Paep. T. V. CoNOCEFÁLEAS. G.IV. Cecro])ia, L. 1. Hojas 7 ó 9 lobadas y partidas hasta el 1|3 de su diámetro, 2. — Hojas "7-9-11 lobadas y partidas solamente hasta en medio, 3. 2. De cara superior áspera y verde, mientras la inferior es blan- co-tomentosa, con los nervios ordinariamente alampiñados; el limbo de como V de diámetro, cuyos lóbulos ovales y con una punta son enteros y desiguales entre sí, largamente pecioladas; ñores mascu- linas numerosas en los receptáculos y cortamente pediceladas, las femeninas al contrario son solamente 4 ó 2 y sésiles. C.peltata, L.: C. T. V.,pár. 63. 3. Ásperas y alampiñadas á la vez por la cara superior, mientras la inferior es blanco-tomentosa, con lóbulos oboval-oblongos y ob- tusos. C. fciímata, W. Familia 40. — CELTIDEAH. — Árboles ó arbustos con ramos alternos, frecuentemente armados de espinas axilares, con hojas al- ternas, enterísimas ó aserradas, casi siempre trinervias y acompa- ñadas de estípulas caedizas. Flores polígamas solitarias, cimoso- apaiiojadas ó racimosas, con perigonio calicino pentafilo ó 5 partido, empizarrado en la estivacion, abierto en la florescencia, deciduo ó persistente ; estambres 5, insertos en lo bajo del perigonio y opues- tos á sus segmentos ú hojuelas, de filamentos rollicitos, casi siempre cortos, encorvados en la estivacion, enderezándose elásticamente en la florescencia, con anteras biloculares, articuladas por el dorso en el ápice del filamen+í), de ordinario estrorsas en la yema y después introrsas, lonjitudinalmente dehiscentes. Pistilo con ovario aovado, frecuentemente inequilateral, unilocular, con un solo huevecillo fijo en la pared cerca del ápice y anfítropo con micropilo superior, de cuyo ápice salen 2 estilos con estigmas aleznados. Drupa poco carnosa y monosperma, de semilla pendiente, arqueada hacia ar- riba, con tegumento tenue, membranoso ; endospermo carnoso, es- caso ó desvanecido; embrión derecho, ganchudo, con cotiledones planos ó conduplicados é incumbentes, de raicilla larguita y supera. G. I. Celtis, L., 1. — Anteras prolongadas por la base; estilos lineares enteros, 2. — Anteras iguales por la base; estilos bífi- dos, 3. 2. Árbol sin espinas, con hojas aovadas, oblicuas por la base, cuspidadas, aserradas superiormente, alampiñadas, con las nerva- duras saliendo de la base y proeminentes inferiormente. C. triiicr- íJm,Lam. — C. Jamaicensis. — C. Swartzii, Planch. 3. Arbusto sarmentoso, muy ramoso, con las espinas estipulares recorvadas ; hojas aovado-oblongas, subtriplinervias y lijeramente oblicuas por la base, enteras y lampiñas. Flores cimosas; drupa ao- vada amarillenta, carnudita, cuyo pedicelo es tan largo como el pe- ciolo. C. aculeata, Sw. — Rhaomms igtumeícs, L. — Ziziphus igua- nea, L. — Mertensia aculeata, W. — M. Icemgata, W. con dos va- DIC')TILEDO.\EO>. — (jLAtE XVII. - l'RTU'ÍNEA^ . 83 riedades, délas cuales una tiene las hojas aserradas superiormente. C. serrata^ y la otra las hojas y la inflorescencia pubescentes. C. pvJjescens. C. T. V., 674. F amilia 41 . — MOMEAS. — Arboles ó arlustos mas ó menos lechosos y también yerbas acaules de hojas simples, radicales, mas ó menos lobadas y largamente pecioladas : cuando pertenecen á los árboles son, al contrario, siempre ramales enteras, alternas mas ó menos pecioladas ; estípulas frecuentemente enrolladas y conte- niendo entonces la yema en la prefoliacion, persistentes ó caedizas y dejando casi siempre en pos de sí una cicatriz semi-anular; flores unisexuales, cuyas masculinas ordinariamente amentaces espigadas ó racimosas, ocupando á veces la parte superior ó los lados del re- ceptáculo, se componen de un perigonio 30 4 partido, cuyas divi- siones son empizarradas durante la esti vacien, y alguna vez suelen faltar enteramente: hay 3 á 4 estambres insertos en el fondo ]¡eri~ genial y opuestos á las divisiones, de filamentos hliiormes ó subu- ladas, lisos ó arrugados por el través, al principio encorvados en la yema y por último estendidos y algo esertos que llevan una antera introrsa, bilocular aovada y casi globosa, dorsifija, derecha, recos- tada y lonjitudinalmente dehiscente ; pistilo rudimentario y algu- nas veces enteramente borrado; las flores femeninas son, al contra- rio, mas densamente espigadas ó apretadas en receptáculos mas 6 menos globosos, algunas veces entremezcladas con las masculinas sobre un receptáculo plano y abierto, piriforme, cerrado y sin mas abertura que su ápice en donde se hallan las masculinas : están for- madas de un perigonio tetráfilo ó con o hojuelitas cóncavas y bise- riadas, cuyas esteriores son mayores, pistilo cuyo ovario sentado ó mas ó menos estipitadito, es unilocularó rara vez bilocular con una celda menor y vacía, mientras se halla en la otra un huevecillo in- serto en medio de la pared, anfítropo, encorvado y con el micrópilo superior, estilo terminal y bíñdo, ó escéntrico y entero. El fruto consiste en un aquenio ó en utrículos monospermos inclusos en un perigonio que se vuelve carnoso, libres ó unidos entre sí para for- mar un sincarpio, otras veces están contenidos en un receptáculo carnoso, raras veces se hallan sostenidos por un estipulo alojado, y parcialmente ceñidos por sus márjenes; semilla única y como gan- chosa, de tegumento crustáceo y frájil ó tenue y membranáceo, con el hilo ventral ; endospermo carnoso y embrión derecho ganchoso, con cotiledones oblongos, planos é incumbentcs ó recostados y cuya raicilla mas ó menos larga es supera. U. I. Maclura, Tsutt. — 1. Arboles siempre espiuoscs, '2. — Árboles inermes, 3. 2. Con hojas gruccramente aserradas, oval-oblongas ú oblongas, con una puntita, redondeadas ó sub-acorazonadaspo}' la base que es algo desigual, lampiñas: espigas masculinas cilindricas: cabecitas femeninas globosas, cuyas flores tienen un estilo njas largo que sr diámetro. M. xanthoxilon, Endl. Broussonetia tinctoria, Klh. Mo rus íj:ant/ioxüo?i, j£iGC[. 3. Árbol cuyas hojas sub-enteras oblongas, aguzadas y sub-tron- cadas por la base son alampiñadas ó pubescentes en los nervios de la 84 DIVISIÓN SEGUNDA. FAN EROGAMOS. cara inferior, blanquecinas; ñores masculinas en espigas cilindricas, mientras las femeninas son en cabecitas globosas, casi tan largas como los peciolos; estilos casi tan largos como el diámetro de las flores. J/. Unctoria, Don.: C. T. V., par. 459. G. II. MoRus nigra, L. Moral. G. III. Ficus, L. — 1. Hojas palmeadas y 5 lobas; 3 estambres, 2. — Hojas nunca palmeadas ni lobadas tampoco, pero siempre en- teras; 2 estambres, 3. 2. Este yejetal, que en Europa se eleva de 20' basta 25' de altu- ra, se queda en las Antillas y en el continente americano al estado de arbusto, de tallos poco ramosos y casi derechos, con hojas bas- tante grandes largamente pecioladas y acorazonadas por la base, de cara superior verde oscuro, lustrosa y áspera, mientras la infe- rior, de color mas pálido, es pelitiesa; frutos bastante gruesos, mo- rados ó blanco-amarillentos. F. ccirica, L.: C. T. V., par. 627. 3. Fruto mellizo las mas veces y cuyo diámetro transversal es de como 2 á 3'" solamente, 4. — Fruto siempre solitario, cuyo diáme- tro transversal es de 4'" hasta 12'", 7. 4. Hojas lanceolado-oblongas: fruto globoso casi tan largo como su pedúnculo pruinoso y aplanado por el vértice, 5. — Hojas oval- oblongas ú oblongas ; fruto 3 ó 4 veces mas largo que el pedúnculo y á veces cóncavo por el ápice, 6, 5. Árbol regular de hojas oblongas, obtusas, ó con una punta, re- dondeadas por la base, largas de 2" 1|2 á 3" sobre 3[4" ó 1" IfZde ancho, con 8 á 14 nervaduritas apenas notables y cuyo peciolo es largo de unas 3 á 6'" ; frutos algunas veces provistos de callos al re- dedor de la parte chata, de abertura cerrada, de 2'" li2 de diámetro y cuyo pedúnculo es jargo de 2'" solamente: involucro bilobo y di- minuto. F . sumacheri, Gr. 6. Árbol que se eleva como á 20' de altura, con hojas coriáceas, redondas por el vértice y obtusas por la base, largas de 1 ó 2" sobre 8 á 12'" de ancho, cuyo peciolo asperito es largo de 2 á 3'", con 8 á 10 nervios apenas visibles ; fruto lampiño amarilloso y por último rojo, con bracteitas que tapan la abertura y donde forman un pezon- cito obtuso y cónico : involucro bilobo y diminuto. F . perttisa, L. — — F. Americana, Swtz. — ürostigma pertusa, Miq. 7. Higos de como 8 á 12'" de diámetro, 8. — Higos cuyo diámetro es solamente de 4 á 8'", 13. 8. Hojas mas ó menos elípticas ; involucro diminuto, 10. — Hojas nunca elípticas, pero ovalo-redondas por el vértice que tiene á ve- ces una punta obtusa; involucro bastante grande y tan largo como el mismo fruto, 9. 9. Árbol de hojas largas de 5 á 9" sobre 3 á 6" de ancho, cuyo peciolo cortito tiene solamente 2 á 9'" y provistas de 7 9 nervadu- ras; fruto globoso, subsesil, aterciopelado, con bracteitas que tapan la abertura ceñida por una especie de anillo calloso y mamiliforme ; involucro bilobado y aterciopelado ; fruto con 8 á 10'" de diámetro. F. crassinervia, Desf. — Urostigma cassinervia. — U. arderianum, Miq. — U. t')igouatiwi,Gr. 10. Hojas elíptico-oldongas con una punta ; higos globosos ape- DIC0T1Lí:dÓNE0S. — í'LASE XVII, -— UKTICÍNEAS. 85 luzados 6 alampiñados 2 á 3 veces tan largos como el pedicelo que los lleva, 11. — Hojas elípticas obtusas; higo lampiño mucho mas largo que su pedicelo, 12. 11. Árbol grande, de hojas cuya base es acuñada ó redondeada, con puntitos blancos esparcidos por la cara inferior, largas de 6 á 8" sobre 2" li2 á 3" de ancho, con 12 á 15 nervaduras; peciolo largo de 1" á 1" l\2 ; fruto cuyo vértice está provisto de bracteitas anchas y formando un pezoncito distinto, umbilicado y convexo á la par, y abierto. F- lauri folia, Lam. — F. xirens, Ait. — F. Martinicensis, Yv-;_ rrostigmd laimfolia, Miq. C. T. B. (r28. 12. Hojas o])tusas por ambos estreñios, algo ásperas y con pun- titos blancos esparcidos por sus amljas caras, largas de 4" y anchas de 2", con *7 á 8 nervaduras y cuyo peciolo es largo solamente de 6 á 8'" ; higo allanado ó achatado por el vértice, abierto y cuyo diáme- tro es de 8 á 10" : involucro con 2 lóbulos redonditos. F. sufocans, H. K. B. F. cüHfoUa, Lam. 13. Hojas mas ó menos ovales ó aovadas, 14. — Hojas ni ovales ni aovadas tampoco, 21. 14. Ovales; higos globosos, 4 á 5 veces tan largos como su pedí- celo ó subsentados, puljescentitos ó alampiñados: involucro 1{4 tan largo como él, 15. — Aovadas , aovadc-acorazonadas ó aovado- oblongas, 16. 15. Hojas redondas por ambos estremos ó sub- acorazonadas por la base, con 6 á 8 nervaduras y cuya cara superior está provista de puntitos blancos, largas de 3 á 5" sobre 2 á 3" de ancho y cuyo pe- ciolo es largo de 4 á 10'"; fruto de 5 á 8"' de diámetro y teniendo la abertura del vértice tapada por bracteitas formando un pezoncito obtusamente cónico; involucro bilobo y pubescentito. F. trígona, L. — Urostigma trígona, Miq. 16. Aovadas solamente y una puntita ; higo globoso lampiño y 3 á 4 veces mas largo que el pedicelo ; involucro diminuto, 17. — Ao- vado-acorazonadas ó aovado-oblongas, 18. 17. Hojas redondeadas ó sub-acorazonadas por la base, largas de á 7" 3" sobre á 4" 2" de ancho y cuyo peciolo tiene ó 2" T'de largo ; nervaduras 8 á 10'; higo allanado por el vértice cerrado, rojo y cuyo diámetro es de 6 á 8". F. lentighiosa, V. — F. tinctoria, Tuss. — Urostigrjia lentighiosa, Lieb. — ti. Icmrífolium, Gr. 18. Aovado-acorazadas ó aovadas con una puntita ; higo apeon- zado tan largo como su pedicelo, inclinado hacia abajo y glabro ; in- volucro diminuto, 19. — Aovado-oblongas, ordinariamente con una puntita obtusa ; higo globoso, casi tan largo como el pedicelo y lam piño. 20. 19. Hojas un poco ásperas y con puntitos blancos esparcidos por la cara superior, mientras la inferior es diminutamente reticulado- venosa, largas de 3" l\2\" l\2 á sobre ó 2" 1(2 1" de ancho, con peciolo largo de 8 á 18"' ; fruto lijeramente umbilicado por el vér- tice, affuiereado v bracteado, verdoso v de 6"' de diámetro. F. Jcb- vigata, V. — Urostigma lavigata^ Lieben. 20. Árbol grande y coposo, con hojas redondeadas ó acorazona- das por la base, largas de 2 á 3" sobre 1" ó 1" 1^2 de ancho, cuyo 86 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. peciolo tiene 8 á 15'" de largo con 6 á 8 nervaduras poco pronuncia- das ; fruto rojo morenuzco, con bracteitas tapando la abertura del vértice en donde forman un pezoncito obtusamente cónico; involu- cro diminuto cuyos dos glóbulos son redonditos. F .fopiílnea^ W. — Urostigma ])0])ulnea, Miq. 21. Mas ó menos elípticas ú oblongas, pero nunca lanceoladas, 22. — Nunca elípticas pero sí lanceoladas , mas ó menos oljlon- firas, 25. 22. Solamente elípticas y obtusas por ambos estreñios; higo glo- boso subsesil Y lampiño, 23. — Oblongas ó elíptico-oblongas, con una punta; higos globosos, glabros, am^arillentos y mas largos que el pedicelo estriaclito, 24. 23. Hojas largas de á 4" 2" sobre á 2" 1" de ancho, de peciolo largo de 8 á 10'", y con 8 á 10 nervaduras ; fruto con bracteitas que tapan la abertura del vértice donde forman un pezoncito convexo y cefiido por un anillo calloso; involucro 1|2 ó 3^4 tan grande como el fruto, y con 4 ló1)ulos irregulares, deltoideos ó redondos, ordinariamente sub-dimidiados. F. dimidiata, Gr. 24. Árbol bastante grande, con hojas redondeadas ó cortamente acuñadas por la base, largas dea 4" 2" sobre 1" 1[2 1" ó de ancho, cuyo peciolo tiene 6 á 8'" de largo, con puntitos diminutos y blan- quecinos por ambas caras, 8 á 12 nervaduras apenas visibles: higo amarillo pálido, profundamente cóncavo por el vértice y cuyo diá- metro es de 5 á 6'", bracteitas tapando su abertura y formando en el centro de ella un punto convexo ; involucro diminuto cuyos dos lóbulos esrendidos y redondeados tienen apenas 1'" de largo. F. ochroleuca, Gr. — F.j^ertusa, Swtz. — F. Americana, Lam. 25. Lanceolado-objongas ó elíptico-oblongas, con una punta ob- tusa; higos globosos, glabros y rojizos, casi tan largos como el pe- dúnculo, 26. — Lanceolado-oblongas j obtusas, pero jamas elípti- cas; higo globoso, lampiño, rojizo y 3 á 4 veces mas largo que su pedúnculo, 27. 26. Árbol grande, con hojas acuñadas ó redondeadas por la base, un poco ásperas por causa de los puntitos blancos esparcidos por su superficie, ordinariamente largas de 3" y anchas de 1" lf2, cuyo pe- ciolo es largo de 4 á 6'", y con 8 á 12 nervaduras poco pronuncia- das; fruto aplanado por el vértice, ó algo calloso al rededor de su abertura tapada ; pedicelo inclinado y ordinariamente mellizo de 4 á 6'" de largo ; involucro lijeramente bilobo dos veces mas corto que el diámetro transversal del ñ'uto, y cuyos 2 lóljulos son redondos. F. ¡jediinculata, Ait. Urostigma 2)eduncidata, Miq. 27. Árbol bastante grande de hojas acuñadas por la base obtusita, largas de 2 á 4'' y anchas de 1" á 1" 1^3, con peciolo de 3 á 8'", y cuya cara superior tiene esparcidos puntitos blanquecinos diminu- tos nervaduras 8 á 14, poco pronunciadas ; bracteitas tapando la abertura del fruto y formando en el vértice un pezoncito chiquito y convexo involucro diminuto y bilolio. F. ;palJida, Y, G. 1\ . DoiíSTENiA, L. — 1. Receptáculo siempre cuadrangular ó de 4 lados y mas ó menos onduloso por la circunferencia, 2. — DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XMII. — AMENTÁCEAS. 87 Receptáculo nunca ciiadrangular, pero mas ó menos discoideo ó cia- tiforme y bastantes veces dentadito, 5. 2. Hojas acorazonado-redondas, palmati-partidas ó palmatifidas, 3. — Hojas acorazonadas ó palmeadas, 4. 3. Yerba con rizoma ramosa, cuyas escamas estipulares son ver- des j estendidas; de hojas ásperas y alampiñadas, cuyos lóbulos- ovales ú oblongos, ordinariamente aguzados, son recortados, den- tados, ó sub-dentados; limbo de 3 á 8" de diámetro y situado en e] 7 7 %j vértice de un pociolo largo de 4 á 6" : receptáculo peltado de 6 á 8'" de diámetro, cuya márjen es dentada ó lobada, y sostenido por un pedúnculo derecho, dilatado por el vértice y largo de á 6". B . coii- trayerva, L. : C. T. V., par. 458. 4. Se parece mucho á la anterior, de la cual difiere por sus hojas casi enteras ó algo angulosas y cuyos ángulos son aguzados y por el receptáculo, son muy ondulosas. D. Houstoni. ^ 5. Plantas con tallo, 6. — Plantas sin tallo ninguno, 'I. 6. Yerba que se cria en las orillas de los arroyuelos y de las que- bradas, con tallitos colorados y escamosos, cuyas hojas de peciolo largo y erguido, que sale de la axila de las brácteas escamiformes, son ovales, dentadas y erguidas, 5 nervias y de color verde oscuro: de los pedúnculos laterales y rojizos, los unos se terminan por un receptáculo discoideo y globoso á la par, con flores masculinas y sé- siles, mientras los otros lo llevan aplanado, anguloso ó laciniado y con flores femeninas v fértiles. I), caulescens. 1. Hojas acorazonadas, repando-enteras, 8. — Hojas espatulado- oblongas: receptáculo ciatiforme, 9. 8. Hojas alampiñadas, largas de á 3" 1" y anchas de á 1" li2 1" algo mas corto el limbo que el peciolo, obtusitas; receptáculo orbi- cular dentadito y peltado^ cuyo diámetro es de 4'", apenas convexo intei^iormente y sostenido por un pedúnculo pubescente no tan largo como los peciolos, que tienen de á 4" 2". D. cordifolia, Lam. 9. Hojas peluditas ó alampiñadas, largas de á 2" l\2 1" li2 y an- chas solamente de á 12"' 6"', obtusas, sub-acorazonadas por la base, festoneadas y de limbo mas largo que el peciolo, que tiene como 1"; receptáculo un poco con figura de trompo, peltado, subentero ó den- tadito, pubescente por debajo, cuyo diámetro es de 3 á G'", con el pedúnculo mas corto que los peciolos. D. tuMcina, R.P. ÓEDEN 2. — PERÍJINOS. CLASE XVIII. — AMENTÁCEAS. SUB-ÓRDEN 1". — EXALBUMINADOS. Familia ^%—JUGLANDAC FAS ó JVGLANDEAH. ^ Ár- boles generalmente bastante grandes, corpulentos y coposos, cuyas hojas alternas, compuestas y pinadas ó solamente de 3 en rama, sin glándulas, pero oin embargo aromáticas, no están acompañadas de 88 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS, estípulas; flores monoicas, amentáceas y apétalas cuando masculi- nas y formadas de un perigonio cuyo limbo está partido en 2 á 6 la- cinias desiguales, pegado por la base con una bráctea simple ó trí- loba, conteniendo estambres en número igual ó doble del de sus divisiones y algunas veces basta indefinidos, insertos en un torus ó disco y cuyas anteras tienen las dos celdillas situadas en los lados de un conectivo que á veces se vuelve espeso y se prolonga por en- cima de ellas: las flores femeninas, al contrario, tienen su perigoniu adherente con el ovario que encierra y cuyo limbo se divide por encima de él en 4 lóbulos que alternan alguna rara vez con la de una especie de corola muy pequeña y caduca que suele faltar: tal ovario uni ó 4 ovulado tiene una celda única, pero partida en 4 cel- dillas falsas por medio de 4 tabiques falsos ó incompletos, otras ve- ces bilocular y con dos huevecillos colaterales y cola'antes del ver- tice de las celdas; estigma grande, papiloso, discoideo, 4 lobo y sentado: ordinariamente sin embargo hay un estilo muy corto ter- minado por dos ó cuatro estigmas largo--, sub-cilíndricos y arrolla- dos hacia afuera. El fruto es una drupa ó mejor una nuez conte- niendo una semilla única formada de un embrión sin endospermo, oleajinosa y cubierta de un episperma membranoso, cuyos cotiledo- nes_, rnuy gruesos, carnudos y anfractuoso - sinuados , son 4 lobos raicilla superior y yemita con dos hojitas pinadas. JuGLANS, L. — 1. Árbol grande de hojas con 15 hojuelas, 2. — Arbolito cuyas hojas son de 3 en rama, 3. 2. Muy corpulento, frondosísimo y cuya corteza tiene un color ceniciento: hojas muy grandes, cuyas hojuelas, de 2 á 3" de largo y con la base desigual y redondeada, son aserradas y pubescentes, así como sus peciolos cortitos; flores saliendo antes que las hojas, cu- yas masculinas en amentos están formadas de escamas oblongas y tridentadas ó profundamente partidas por ambos lados ó bordes y llevando unas 8 á 10 anteras oblongas casi sentadas, mientras que las femeninas, provistas de escamas bracteiformes 4 dentadas, son masó menos solitarias, cuyo ovario oblongo se termina por un es- tilo que lleva dos estigmas divaricados y muy largos. Nuez amari- llenta, oblongo-oval, con una puntita en el vértice, velluda y como pegadiza ala vez, de cuesco muy duro y leñoso. /. cinérea, L. : C. T. Y., par. 412. 3. Como de unos 20' de altura, hojas de hojuelas lanceolado- oblongas ó elíptico-oblongas, redondeadas por la base y obtusas por el vértice, pecioladas, cuya márjen está arrollada por afuera y de cara inferior pubescente ó alampiñada, y cuyo pelo persiste ordina- riamente en las costillas ; son largas de 2" á 3" 1{2 y casi tanto como el raquis que las lleva; amentos masculinos pedunculados y axila- res ; flores femeninas 'solitarias, de perigonio libre y 5 partidos, sos- tenidas por un pedículo delgado, pubescente; brazos del estilo con estigma papiloso, 3 á 4 veces mas largos que las divisiones perigo- niales, lineares y obtusas : ovario bilocular ; drupa unilocular por causa de aborto, ovoideo-globosa y amarillo-anaranjada. ./. haccata, L. Picor de iidron juglans, Gr. P. arJjoreum.Vl. Rhus (irlorea , Macf. Sclimidelici macrocarim, Rich., fl. Cba. DK'OTILEDÓNEOS. — CLASE XTIII. — AMENTÁCEAS. 89 •, Famüia 43. — SALICÍNEAS , SALICÁCEAS. — Arbustos ó árboles ramosísimos, de hojas simples, coriáceas, mas ó menos es- trechas y siempre lanceoladas, lustrosas, mas ó menos pecioladas ó sésiles, enteras, y cuja base está acompañada de estípulas caducas; son alternas ó esparcidas; ñores amentáceas, monoicas ó dioicas, muy pequeñas y desnudas, cujas masculinas constan de 2 hasta 20 estambres, situados en la base de una escama que reemplaza al cá- liz ó insertos por su cara superior, mientras que las femeninas se componen de un pistilo formado de un ovario fusiforme, terminado por dos esti.Q'mas bipartidos, j situado también en la axila de una escama igual á la de las masculinas ; algunas raras veces está acompa- ñado de un involucro á manera de cúpula, simulando el perigonio : tal ovario uni ó bilocular con uno ó con muchos huevecillos dere- chos, asidos al fondo de las celdas y por la base de dos tropospermos parietales. El fruto es una cápsula pequeña y oblonga y sus muchas semillas son con pelo blanco y sedoso ó desnudas, cuyo embrión derecho, homótropo y sin endospermo está envuelto en el epispermo. Salix, L. — 1. Árbol frondoso cuyas ramitas larguísimas y del- gadas se doblan hacia abajo y alcanzan casi al suelo, 2. — Árbol mucho mas alto, piramidal, ramosísimo, con ramas erguidas y mas cortas, 3. 2. Casi con figura de paraguas, cuyas hojas lineares, lanceoladas y lampiñas son finamente aserraditas, á las cuales suceden después de desprendidas amentos cilindricos y delgaditos ; brácteas, ovario y cápsulas lampiños. ;S'. h ahilo iiica, L. 3. Hojas lineares aserradas y lampiñas, largas de á 2" \xl 1" li2 j anchas de á 4'" 3'"; estípulas caedizas; amentos terminales sa- liendo con las hojas en la sumidad de las ramitas ; brácteas peludas j deciduas, ordinariamente con 4 á 6 estambres; estigmas sentados; cápsulas glabras, oval-cónicas, cujo pedículo es 3 á 4 veces mas largo que el disco. S. Hicmioldtiana, W. : C. T. V., par. 7*79. Familia 44. — MIRICACEAS. — Arbustos ó arbolitos ramosí- simos cuja corteza trasuda resina ó cera aromática, de hojas "senci- llas, enteras, mas ó menos pecioladas, alternas ó esparcidas, con estípulas ó sin ellas, cuya cara inferior está provista de puntitos trans- parentes resinosos. Flores amentáceas, desnudas j muj pequeñas, monoicas olas mas veces dioicas, cuyas masculinas constan de mu- chos estambres, ordinariamente agrupados en un andróforo ramoso y situado en la axila de una escama bracteiforme, otras veces son solamente 2, 6 ú 8, cuyas anteras 2-4 loculares se abren lonjitudi- nalmente : las femeninas al contrario, ordinariamente solitarias y sentadas también en la axila de una bráctea mayor que ellas y for- mando por su reunión amentitos glo1)osos : se compone de un ovario lenticular, con un solo huevecillo basilar y atropo y de un estilo muy corto, que llevados estigmas largos, alesnados y glandulosos : tal ovario está acompañado hacia el lado esterior de dos ó de mayor número de escamas hipójinas y persistentes, las cuales á veces se sueldan con él, que se ha vuelto una especie de nuececita monos- perma é indehiscente ; otras veces membranácea y como aladita por los bordes, envuelta en una capa de cera, dispuesta por granitos, la 90 DIVISIÓN SEGU>^DA. FANEEÓGAMOS. cual suele faltar alg-unas veces; semilla derecha sin ondospermo al- guno, j CUYO emLrion grueso sigue una dirección opuesta á la suya y antitropo j está inmediatamente cuLierto por el epispermo del- gadito. Tribu 1^. — MiRÍCEAS. — Arbustos cuyas hojas tienen puntitos ó glándulas resinosas ; flores desnudas y amentáceas; estambres 2, 6 ú 8, óvulo simple, basilar atropo, estigma bipartido. Myeica L. — 1. Hojas oblongas ú oblongo-lanceoladas, 2. — Hoja espatulñdas ó lanceoladas, 3. 2. Oblongas solamente, estrechadas por la base y algo aserraditas hacia el vértice: amentos masculinos abuzados, bavas e-lobosas con cera. M. cerífera, L. — Oblongo lanceoladas, acuñadas y cónicas por la base, enteras, sensiblemente lisas y lustrosas, pero de costilla velluda. M. Mexicana, L. 3. Aserradas especialmente mas allá del medio ó "sub-enteras, cuya cara superior es pubescente ó ¿ilampiñada, mientras la inferior tiene sus nervaduras solas pubescentitas ; amentos dioicos, serótinos y subsolitarios y axilares, cuyos masculinos, cortamente cilindricos, tienen las fiores con brácteas cuneiformes, de 4 á 5 estambres con los filamentos reunidos hasta el medio, insertos en un andróforo fili- forme peludo : mientras los femeninos ovoideos tienen sus flores con brácteas caducas; fruto drupáceo-ovoideo y cubierto de cera. M. rnicrocarpa, Benth. : C. T. Y., 283. Tribu 2. —: Casi:ahíneas. — Arboles bastante grandes , sin ho- jas, cuyas ramitas estriadas tienen sus nudos ceñidos por una vai- nita como foliácea; flores desnudas amentáceas é involucradas, un solo estambre; ovario unilocular de huevecillo simple y colgante; esti gma biparti el o '"jasímrma equisetifolia , Fort . SERIE n. — PEPtIA]S'TAI)OS. ÓRDEX r. — EPIJINOS. SVB-ÓRDEN i". — ÍÍINANDROS. CLASE XIX. — ARISTOLÓQÜINEAS. Familia 45. — ARISTOLOQUIACEAS ó ARISTOLÓ- Q,UIJSAS. — Yejetales sofruticosos ó á veces arbustillos, cuyos tallos mas veces sarmentosos, mas ó menos largos, mas ó menos ramosos, trepan por encima de los vejetales vecinos, de corteza bas- tantes veces como corchosa; algunas veces son plantas herbáceas vivaces. Hojas sencillas largamente pecioladas, alternas, enteras ó lobadas, mas ó menos anchas y grandes, frecuentemente acorazona- das por la base, lustrosas, coriáceas y lampiñas, sin estipulas. 1^ lores hermafroditas solitarias ó á veces en evspecies de racimos paucifloros y siempre axilares, pedunculadas y cuyo pedúnculo está con fre- cuencia acompañado por una bráctea mas ó menos grande; regula- rJlCOTÍLEDÜXEOS. — CLASE XIX. — AlíISTOLOQ.UÍNEAS. 91 res é irregulareri, formadai^ de un periantio tu])ulo.so, petaloídeo y pintado con los colores mas variados t bastantes veces primorosísi- mo, cuya fig-ura y tamaño varían mucho, con un lóbulo único y lin- G'uiforme, llamado labio, mas ó menos grande, mas ó menos largo, que suele faltar algunas veces; otras veces son tríloljas y de estiva- cion vulvar; 6 hasta IG estambres hay insertos ordinariamente sobre el ovario y pegados en derredor de la base del estilo, cuyas anteras sentadas son estror.->as y biloculares; otras veces, cuando falta el os- tih), son casi sentadas y salen de un disco epijino. Pistilo formado de un ovario único, libro, con 3 ó 6 celdillas, coherentes en el cen- tro por medio de la,> placentas muitispermas; los hueveciilos están pegados en dos series verticales en el ángulo interno, ascendentes ú horizontales; de un estilo terminal, corto 3^ en forma de columna, coronado por un estigma arrayonado por á 3,4 06 radios ; el estilo suele faltar algunas veces. Fruto ordinariamente capsular, de dehiscencia loculícida, cuya cada celda contiene muchas semillas achatadas ó angulosas, presentando hacia el ápice de un epispermo grueso carnudo ó algo córneo, un embrión pequeñito, derecho, cuya raicilla, mas larga que los cotiledones, mira hacia el hilo; raras ve- ces el fruto está abayado. Aristolochia, L. — 1. Hojas lobadas ú orejudas, 2. ■ — Hojas siempre enteras, 1. 2. Bi ó trílobas, sin ó con orejita, con ó sin l)ráctea, acompañando á la inserción del pedúnculo unifloro, 4. — Siempre orejudas; hráctea abrazadora del tallo, ancha y acorazonada, acompañando á la inserción del pedúnculo, 3. 3. jíata de tallo voluble, cuyos ramos delgadísimos, lampiños ó pelitiesos, llevan hojas acorazonado-orejudas, obiongo-aguzadas.algo obtusas, pecioladas, y cuyas orejitas son obtusitas: pedúnculos uni- floros, mas corros que el peciolo : perigonio, sedoso, tubuloso, algo inflado, largo como de unas 7 á 8'" vcuvo vértice es lingüiformc v aguzado. A. 2^entandra., Jacq. 4. Bílqbas ó las mas veces trílobas; pedúnculo unifloro, saliendo de la axila de una bráctea grande, acorazonado-redonda y persis- tente, 5. — Orejudo-trílobas, pedúnculos unifloros sin Ijráctea al- guna, 6. 5. Tallo largo del tamaño del dedo pulgar, algo mas ó menos par- dusco, enredadero y cuyos muchos ramos muy largos, casi volubles y algo alarapiñados, llevan hojas truncadas ó acorazonadas por la base, pedatinervias y de cara inferior pubescentita , de lóbulos es- lendidos, oblongos ú oval-oblongos, obtusos, bastantes veces Trun- cadas por el medio, de manera que parecen terminarseenmedialuna, cuyas puntas les hacen bílobas, anchas de 3 á 6" : iimbo-perigonial doblado por adentro, con O estrias por la base hinchada ó 6 espueli- tas, cuya basilar obtusamente Aliforme tiene hasta 2 ó 3'", campa- nudo, cuya boca de golpe uniia1)iada y trunca tiene un labio reden - deadito ú ovaloblongo, como de 8 á 10'" de diámetro y cuyo vértice >o va prolongando en una colita filiforme, larga desde 1" hasta 1'. .1 . triloha, L. — A. Mióla, L. — A. onacruray Mart. — A, cauda- ta. Hook.: C. T. V.. 318-708. 9'^ DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 6. Mata de tallo voluble ramosísimo, delicado, estriado y lam^i- ño, con hojas pecioladas acorazonadas y orejudo-trílobas, obtusas por el vértice y aguzadas á la par, cuyas orejitas obtusas son en- corvadas hacia afuera ; pedúnculos uníüoros é iguales con las flores largas de 1" lj2 y tubulosas, cuyo perigonio ovoideo inílado por la base, algo arqueado y un poco dilatado por el vértice se va prolon- gando en ttna lengiiiía orbicular, obtusísima, verde esteriorniento, mientras que interiormente es aleonado-violácea con pelos ú barba bastante larguira: cápsula globosa del tamaño de la yema del dedo. Á. PasiJlor(pfoUa, Rich., Fl. de Cba. 7. Limbo perigonial, grande y bilabiado, 8. — Limbo perigonial de tamaño variado no grande y unilabiado, 9. 8. Mata enredadera de tallo largo como de 1" 1|2 de diámetro, un poco corchoso esteriormente, mu}^ ramoso, y cuyos ramos, lar- guísimos, llevan hojas grandes, larguísimamente pecioladas, arri- ñonadas, pedatinervias, como de 3 á 5" de diámetro \ cuyo seno basilar es anchamente abierto, redondas; estípulas acorazonado- redondas y persistentes: tamaño de las llores mu}^ variado, cuyo pe- rigonio, doblado por adentro, tiene la base obovoidea inflada y mas larga que el tubo estrechado; labio superior linear oblongo, doblado lonjitudinalmente, subsesil y como de 2" de largo, mientras el in- ferior, algo mas corto, redondeadito y estrechándose como en uña, es largo de 3", con la lámina espatulada, de 10 á 12'" y aun mas de diámetro. A. Tingens, Yah. — A. (jrci'íidiiíor(i.\di\\. C. T. Y. 31. 10. Mata de tallo erguido, derecho y lampiño, cuyas ramas lle- van hojas acorazonado-oblongas, obtusitas, pedatinervias, de cara inferior pubescentita, bastante grande y cuyo diámetro es de 3 á 4", con el seno basilar, estrecho y abierto á la par: estípulas nulas; limbo perigonial derecho y largo de 1", cuyo labio oval obtuso y sin apéndice terminal es pubescente esteriormente. A. oMíisata, Sw. 11. Labio unilateral, 12. — Labio abroquelado, 17. 12. Hojas acorazonadas bastante grandes, 14. — Hojas elíptico- oblongas y pequeñas, 13. 13. Mata formando maleza sóbrelas rocas, madrepóricas de la isla de Cuba, cuj^o tallo tendido, delgado y lampiño echa muchos ramos que llevan hojas cortamente pecioladas, obtusas por ambos estremos y de cara inferior mas pálida; pedúnculos unifloros mas largos que las hojas, perigonio largo como de 1" 1[2, color purpúreo moradusco y manchado de puntitos color rojo oscuro, inflado y gi- boso por la base, con una lengüita barbuda, obtusa, recortada y mas larga que el tubo que se abre por su cara interna y hacia su parte superior: cápsula ovoidea ;y globosa, apiculada y del tamaño déla punta del dedo. A. tigrina, Rich., Fl. de Cba. 14. Tallo pequeño, enredad ero, saliendo de una raiz con figura de maceta, como de 1" de diámetro lo mas, 15. — Tallo bajito poco enredadero ó no, saliendo de una raiz gruesa y carnosa, con suco ó leche amarillo aleonado, 16. 15. Mata muy ramosa, alampiñada, cuyos ramos delgados y bas- tante largos cargan con las hojas acorazonado-oblongas, obtusitas, pedatinervias, largas como de 3", de cara inferior pubescentita y DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XIX. — ARlSTOLOQüÍNEAS. 93 cuyo seno basilar es abierto; limbo perigonial, encorvado hacia adentro, embudado por arriba y cuya boca truncada se prolonga de golpe en un labio corto, redondo, estrechado por la base y sin apén- dice terminal, interiormente con una mancha morena como ater- ciopelada y peluda, situada hacia el medio. ^1. bárdala, Jacq. : C. T. V., 320-710. 16. Tallo cilindrico, largo, delgado, voluble, estriado y muy ra- moso, lampiño , hojas distantes, aovado-aguzadas, acorazonadas, re- ticulado-venosas, un poco aflechadas, con el seno de la base abierto y profundo, enteras, lampiñas, largas de 4' á 5", 6", y anchas de 3" l\2á4"; peciolo pubescente por su cara superior y largo de 1" 1|2; estípula grande entre acorazonada y redonda, amplexicau- la. Flores solitarias y axilares de pedúnculos delgados, tanto ó mas largos que las flores, que tienen I" 1|2 á 2" 1^2 de largo, unifloro : periantio hinchado y globoso por la base y casi blanco, después viene el tubo estrecho, pero no tarda en volverse infundibiliforme , man- chadito y reticulado de color bruno, de boca dilatada y oblicua, con el labio inclinado mas largo que el tubo y gradualmente acumi- nado desde la base hasta el ápice obtuso y transversalmente dici- plinado de bruno. A. anr/uicida. C. T. V., 319. 17. ]S^inguna estípula: una bráctea situada hacia el medio délos pedúnculos largos; labio anchamente oval, desigualmente unduloso y festoneado á la par, 18. — Una estípula oval y subpersistente ; pedúnculos desnudos y sin bráctea; labio acorazonado oblongo, ni ondeado ni festoneado tampoco, 19. 18. Mata ó arbustillo lampiño ó alampiñado enredadero, cuyos muchos ramos muy largos llevan hojas acorazonadas, puntiagudas, pedatinervias, anchas de 3" á b" y con el seno basilar abierto. Flo- res de tamaño muy variado, abigarradas de purpúreo, cuyo limbo perigonial, doblado por dentro, muy grande y de tubo oblicuo, es 6 costado y 6 giboso por la base ; labio entero por la base, largo de 4 ú 8" y dos veces tan largo como la parte inflada y derecha del tubo, y cuyo vértice va prolongándose en una cola Aliforme y larga de mas de 1'. A. f/randiflora, Sw. — A. arhorescens, Desc. — A. gi- fjas. A.fcctens, Lindl. 19. Mata de raiz fusiforme, larga como de 6", espesa y color verde moreno de la cual sale un tallo lampiño enredadero, cuyos ramos llevan hojas acorazonadas, puntiagudas, pedatinervias, largas de 4 á 5" y cuyo seno basilar es abierto, de cara superior lisa y lustrosa, mientras la inferior, mas'pálida, es pubescente. Pedúnculos axilares como 4 tantos mas cortos como los peciolos, con 1, 2 ó 3 flores, cuyo limbo doblado por dentro es como de unas 6"' de diámetro, mien- tras la parte hinchada ó avejigosa de la base lo tiene de tí á 8'", con la parte contraida del tubo muy corta: labio mas largo que el tubo y tío r" 1|2 á 2'" 1|2 largo y arrejonado. A. odoratissima. L, — A. glaucescciis, Ivth. 04 DIVISIO^■ SEGUNDA. FANEllÓGAMOS. ORDEN II.— PEliÍJíXOS. .SIB-ÓRDEN i '*. ™ ALBT; .MINADOS. CLASE XX. — BALAXOFORÍXEAS. Fmnüia 46. — B AL 12^ OF ORE 18. — Plantas herbáceas viva- ces y parásitas en las raices de los árboles, nunca verdes, cuyo rallo •mas ó menos carnoso tiene 1" liasta 1' de altura, es simple v sale de un rizoma ramoso ó tuberoso, sin hojas, que suelen reemplazar mu- chas escamas, derecho y erguido. Flores agrupadas en un espádice terminal, con frecuencia separadas por escamas filiformes, monoi- cas y apétalas, cuyas masculinas constan de un perigonio valvar, tubuloso y trílolic, cuyas divisiones profundas, iguales y abiertas están algunas veces reemplazadas por una escama simple que enton- ces tiene el lugar del perigonio fallo: hay tres estambres, raras ve- ces en mayor ó menor número, soldados á la par por los filamentos y por las anteras, formando así una columna androforica, cuyos tres brazos cargan con 3 á (5 estamljres y tienen pues 6 á 12 celdas in- trorsas é insertas en la garganta del perigonio. Las flores femeni- nas se componen de un ovario libre ó inferior unilocular, con un huevecillo inverso, coronado por el limbo perigoiiial entero ó par- tido en 2 ó en 4 lacinias desiguales v cuvo vértice lleva uno ó dos estilos filiformes, terminados por otros tantos estigmas sencillos. El fruto es una carionside globosa vumlnlicada, cuva semilla se forma de un embrioncito globoso y alojado en una fosita superficial de un endospermo copiJso. Jlelosis ÍTuianensis , Eich. — Cynomoriuní C(iijennense.%^\ — Phyllocorine Jamaiceiisis, J. Hook. : O. T. V. 58. CLASE XXI. — SAXTALÍXEAS. FamilúoAl. — LOFcANTACFAS. — Vejetales vivaces í>ofruti- cosos ó matas parásitas ramosísimas, de hojas simples, opuestas ó á veces alternas, enteras, sentadas ó pecioladas, mas ó menos espesas y carnositas, sin venas ; suelen faltar algunas raras veces y entonces los vejetales son afíleos. Flores herniafroditas ó dioicas, solitarias y axilares ó espigadas, arracimadas axilares ó terminales, ordinaria- mente pequeñitas y formadas de un perigonio superior que suele faltar algunas veces, con mayor frecuencia saliendo del borde de la espansion cupuliforme y carnosa del pedúnculo y ordiuariamente ceñido por algunas brácteas situadas por la base, compuesto de 3-4 á 8 sépalos, frecuentemente reunidos en un tubo y de estivacion val- var, en ese último caso algunos botánicos lo tienen por una corola seudomonopétala ; tantos estamlires hay cuantos lóbulos perigonia- les, á los cuales son opuestos, de anteras 1 ó biloculares, reventán- dose algunas veces por arriba en muchas cavidades; pistilo único, compuesto de un ovario adherer .e ó infero cuyo vértice coronado DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXÍ. — SANTALÍNEAS. 95 por un disco epijino y anular lleva un estilo largo y delgado que ae termina por un estigma sencillo, algunas veces sentado por faltar el estilo. El fruto es una bava unilocular cuva semilla única, invertida y adherida á la pulpa del pericarpio viscoso y bastante copioso, con- tiene, además de su tegumento propio, alojado en un endospermo carnoso, un embrión cilindrico cuya radícula estávuelta hacia el hilo. T. I. LoRAKTEAS. Yejetales siempre parásitas, de hojas opues- tas ó alternas : flores siempre liermafroditas, con un cáliz y una co- rola frecuentemente muy notables, pero en realidad cuyo perigonio es único; anteras entrorsas bíiobas, basifijas ó pegadas y erguidas, á veces recostadas y vacilantes, abriéndose por dos grietas lonjitu- dinales; ovario unilocular monospermo, de estilo filiforme con un estigma simple y cabezudo ; fruto carnoso drupáceo, coronado por una cicatriz anular ó por la márjen persistente del perigonio y ani- dado por parte solamente en una cúpula bracteiformo, LoRANTHUs, L.: — 1. Flores grandecitas ordinariamentecorímbo- sas,sostenidaspor una brácteacartucliiforme, divisiones i)erigoníales reunidas entubo delgado ; filamentos délos estambreslargos é insertos en la garganta de la corola con anteras oblongas ordinariamente recortadas por el dorso ; estilo filiforme con estigma cabezudo, °2. — Flores siempre pequeñas, 3. 2. Ramitas cilindricas bastante largas y colgantes , con hojas bastante variadas, pero ordinariamente aovada:^ ú ovales, obscura- mente venosas y cuyas nervaduras salen por debajo del medio de la costilla; flores corimbosas de pedicelos temados y tres veces mas largos que el periantio , cuyas divisiones interiores ó la corola están dobladas hacia afuera y un poco mas largas que las anteras recor- tadas, sostenidas por filamentos tan largos como ellas y también como el estilo. X. Americarius, Jacq. — L. Jacqvyíni. D. C. — L. Plumieri. Cham. C. T. Y. 688. 3. Espigadas y anidadas en las escavaciones del raquis con tres bracteitas diminutas enteras, escondidas en su fondo ó abortadas. Pétalos distintos; estambres alternativamente desiguales, insertos por debajo del medio de los pétalos; filamentos estaíiiinales mas largos que las anteras, ahuecados por la márjen y por debajo de las anteras estériles, porque 3 solas son fértiles y acorazonadas, 4. — Nunca jamas anidadas, arracimadas ó espigadas, 5. 4. Ramitas cilindricas y furfuráceas, con hojas ovales, obtusas, peninervias por la base, largas de 3 á \" cuyos peciolos cortos se do- blan sobre sí. Espigas axilares, tetrásticas, frecuentemente mellizo- ternadas, constantemente pedunculadas, ordinariamente tres veces mas cortas que las hojas, cuyas flores aproximadas están provistas de 3 bracteitas redonditas, persistentes y enteramente escondidas en la escavacion raquidiana ; corola purpúrea constantemente oblon- ga cuyas 6 divisiones son lanceoladas. Anteras fértiles redondas y arrejonadas. Baya ovoidea oblonga y morada. L. occide/italis, L. — Z. wtmersícs, Benth. — Z. spicatus, H. B. K. 5. Racemosas y dispuestas en los pedicelos por verticilos de á 3 y sostenidas por una bracteita subulada; pétalos distintos; filamentos estaminales anchos, insertos por debajo do los pétalos, con anteras 96 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. erguidas y recostadas por el dorso; estilo obtusito, 6. — Racemosas ó siibespigadas, solitarias en cada pedicelo : tubo perigonial envuel- to por una bracteita cupuliforme 3 dentada ó 3 fida ; pétalos distin- tos; estambres alternativamente desiguales é insertos por debajo del medio de los pétalos, cuyos filamentos mas largos están abueca- dos por la márjen y debajo de las anteras estériles ; 3 anteras férti- les solamente acorazonadas y erguidas; estilo obtusito, 7. 6. Ramitas cilindricas, con los internudos de las mas tiernas te- trágonos; hojas largas de 1'' 1\2 á 3" , mientras los pedicelos tienen solamente 1'" de largo ; racimos axilares ó terminales y compuestos de grupos de flores subsesiles ó cuyas inferiores están pediceladas ; flores de un color verde blancuzco en verticilos de á tres y sésiles, de cáliz subtrunco, tan largo como la bracteita oval y puntiaguda; co- rola oval oblonga en la yema, cuyos 6 pétalos lanceolado-lineares tienen 1 á V" 1\2 de largo ; los filamentos mas largos son dilatados por el vértice: anteras erguidas y subuladas; estilo un poco con fi- gura de maoeta ; baya oval. L. aviczclaris, Mart.: C. T. Y. 689. 7. Ramitas sub-comprimido-cilíndricas, 8. — Comprimidas y por fin cilindricas, 9. 8. Hojas espatuladas , lanceoladas ú ovales , de base adelgazada hasta volverse peciolo, largas de 1" á 16'" y anchas do 3 á 9'" y ob- tusas; racimos axilares, simples y con 3 á 9 flores; dos veces mas cortos que las hojas, herrumbroso fulfuráceas, pedículos casi tan largos como las flores, cuya corola tiene 6 pétalos lineares y largos de r" 1|2. Bracteitas cupuliformes iguales, anchamento 3 fidas con lóbulos deltoideos. Baya ovoideoblonga. L. 2}ao'i'iJlor'US, Jacq. — L. montan US, Maf. 9. Hojas obovales ó espatuladas, acuñadas por la base, redondea- das ó escotadas po/ el vértice, largas de 1" 1[2 á 2" y anchas de 6 á 12'". Racimos axilares simples y desprovistos de escamas por deba- jo, con 6 ó con algunas flores, tan largos como las hojas; pedicelos distantes y tan largos como las flores cuya corola rojiza oblonga es obtusita en la yema; bracteitas oblicuamente cupuliformes, ancha- mente trífidas y cuyos dos lobos son mas cortos; baya oblonga. Z. imi/lon(.s, Jacq. — L.pari'iflonfyS, Lam. — Viscum jjíiojmreum , L. T. 2. Visteas. Hojas siempre opuestas que suelen faltar algunas veces; flores dioicas ó monoicas, ordinariamente anidadas en el eje carnoso de las espiguitas axilares y o]>uestas; corola y cáliz confun- didos en un perigonio único formado de 3 á 5 lólnilos carnosos cuya estivacion valvares deprimida; disco epijino reunido con el peri- gonio carnoso y de figura de copa ; hay tantos estambres cuantas di- visiones perigoniales, é insertos por afuera del disco entre los sépa- los ; ovario unilocular con tres huevecillos suspendidos. Baya adrupada monosperma, de pericarpio membranoso y con mucosidad. G. 1. Phoradendron, Xutt. — 1. Hojas anchas y bastante grandes, largas de 2 á 6". — 2. Hojas pequeñas y mucho menos largas, 3. 2. Ramitas cilindricas, así como los tallos, cuyo color es amari- llento-morenito, de hojas elípticas ó elíptico-lanceoladas, sub-agu- zadas por ambos estreñios, sin nervaduras ó con nervios distantes y apenas pronunciados á lo largo de la costilla; largas de 3 á 5" y an~ DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXI Hs. — DAFNOIDÍNEAS. 97 chas de 1 á2", con peciolo cortísimo j Lastante dobles. Espigas 3 ó 1, á veces mellizas axilares y 2 á 3 veces mas cortas que las hojas j formadas de 4 á 6 atrejos; ñores femeninas tríñdas; baya ovoidea íí'lobosa.-P/¿. latifolium, Gr. — Visciim latifoliimi, Sw. — V.tereti- caule,Dc. — V.fld'i^escenSyMací. — V. Ctihense,^\Q,\\. C. T.Y. 309. 3. Hojas estrechas y largas de 1 á 2" li2, 4. — Hojas obovales, pequeñas y largas de 2 á 6'", 5. 4. Ramas y ramitas tetrágonas y opuestas, cuyas hojas lanceola- das, linear-lanceoladas ó elíptico-lanceoladas, obtusitas y largas de 1 á 2'' li2 sobre 3 á 8'" de ancho, tienen 2 ó 4 venas delgaditas y situadas por ó cerca de la base de la costilla; 1 á 2 espigas axilares tan largas como las hojas ó mitad mas cortas que ellas, con 4 ó 5 arte- jos distintos y cuyos surcos son tetrásticos; bayas ovoideo-globosas y rojas. Pk. rubrum, Gv. — Viscmn ruh'um, L. — V-tetragonum, Poepp. — V. Kuntlúanum , De. — Lorantlius viscifoUus, Kth. 5. Ramitas tetrágonas que por fin se vuelven estriado-cilíndri- cas, de hojas obovadas, espatuladas ó elíptico-lanceoladas, obtusas, sin venas ó con 3 á 5 nervios muy poco pronunciados, largas de 6 á 12'", sobre 3á 6'" de ancho; espigas axilares solitarias, diminutas y mucho mas cortas que las hojas, con 1 ó con 2 artejos cuyos surcos son tetrásticos. Baya sub-globosa. Ph. 7nyrtiUoides , Gr. — Viscum tctragcviium, De. — V.MucronaPm/i, De. — V. myrtilloides, WU. G. ni. ArceiithoMími , M. B. — 1. Artejos ó piezas de lase spigas con dos ñores. — 2. Flores dispuestas por series marjinales en las piezas comprimidas de las espigas, 3. 2. Ramitas estriado-cilíndricas y frájiles con los internudos del tallo dos veces mas largos que los artejos de las espigas ; escamas con una punta, conniventes y formando una vaina trunca, abierta é igual con la de las espigas axilares, cortamente pedunculadas con 2 ó 6 artejos cuyas flores son aspadas ; ñores femeninas de limbo peri- gonial 3 lobo. A. citpressoides, Gr. — Viscum cupressoides, Macf. 3. Tallo erguido de 1 á 2' de altura, cuyas ramitas ascendentes tienen los internudos ordinariamente largos de 1 ó 1" 1¡2 y anchos de 3 á 6'"; escamas apenas notables y caedizas. Espigas laterales constantemente pedunculadas, cuyas masculinas, largas de 4 á 8'", con tres ó dos artejos, tienen piezas espatuladas con algunas flores dispuestas en una serie por cada márjen, acompañadas de un invo- lucro subtruncado y estendido, mientras las espigas femeninas, mas largas, cilindricas, con 3 ó 4 artejos, tienen piezas con 2 á 4 flores dísticas cuyo limbo perigc-nial tan largo como el tubo es trílobo co- mo en las masculinas, il. opimtioides. Gr. — Visctwi opuntioides L: C. T. V. 308. SUB--ÓRDEN 2. EXALBUMINADOS. CLASE XXI Ms. — DAFNOIDÍNEAS. Familia 4.Q.— LA URACEAS ó LA URÍNEAS. — Arbustos ó primorosos árboles mas ó menos altos y corpulentos, de hojas per- TOMO II 7 98 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓCjAMOS. sistentes y alternas, rarísimas veces opuestas, simples coriáceas, como barnizadas y lustrosas, mas ó menos pecioladas, de tamaño muy variable, pero ordinariamente no muy grandes, enteras y ordi- nariamente provistas de muchísimas glandulitas transparentes y regularmente muy olorosas. Flores apétalas hermafroditas, monoi- cas ó polígamas, dispuestas en grupos axilares, en racimoso en pa- nojas terminales, y que constan de un periantio persistente con 4 ó 6 divisiones profundas y empizarradas por los bordes en la estiva- cion, conteniendo pegados en su base de 3 hasta 12 y mayor número de estambres, dispuestos en 2 ó 3 series, de los cuales algunos sue- len abortar y se quedan representados por sus solos filamentos esté- riles, mas ó menos deformados; mientras los fértiles llevan anteras que se abren por valvas en número de 2 ó de 4 que se levantan de abajo para arriba, ó de la base hacia el ápice. Pistilo único, com- puesto de un ovario superior cuyo vértice lleva un estilo único y simple que se termina en un estilo sencillo. Fruto abayado ó dru- páceo, desnudo ó cubierto, monospermo, frecuentemente situado en el ápice engrosado y crecido del pedúnculo, que vuelto una especie de cúpula acompaña á su base ; semilla única que contiene por de- bajo de su epispermo un embrión muy grueso inverso como ella misma y homótropo : sin endospermo alguno, cuyos cotiledones gruesos y carnosos son mas ó menos oleojinosos y siempre fecu- lentos. Análisis dicotómica de las tribus. 1 Flores hermafroditas ó polígamas, 2. — Flores dioicas ó polí- gamas. 8. 2. Hermafroditas solamente, 3. — Hermafroditas y polígamas á la vez, 7. ' 3. De limbo perigonial, articulado y caduco, 4. — De limbo peri- gonial persistente, 5. 4. Cuyas divisiones son anchas: glándulas con forma de dientes, y estambres fértiles con anteras de 4 celdillas dispuestas á manera de media luna inferiormente, las anteras de la serie interior son es- trorsas. Baya pegada por encima de una cúpula profunda y trunca ala vez; yemas de las ramitas incompletas. T. I. Nectandreas. — G. II. Cuyas divisiones no son anchas, glándulas estaminiformes : cel dillas de las anteras nunca dispuestas en media luna ; anteras de la serie esterior estaminal saliendo un poco por afuera. Yemas de las ramitas completas. T. II. Camforeas. — Cam])liora officinalis. — Laurus camyliora, L.: C. T. V., 289 Ms. 5. Siempre persistente ; glándulas estiminiformes; anteras bi ó 4 loculares cuyas interiores son entrorsas; yemas de las ramitas in- completas. T. III.Fcebeas. — Phcede montana, Ot. — Laurus mon- tana, Sw. — Cinnamomummonianum, Ns. C. T. Y. 223. — Persis- tente ó caduco 6. 6. Caduco por desarticularse ; con ó sin glándulas estaminifor- mes ; anteras cuyas interiores estrorsas tienen dos ó 4 celdillas ; fruto seco ó carnado y encerrado en el tubo perigonial vuelto car- j20so ó endurecido; yema de las ramitas incompleta. T. IV. Crip- DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXI Hs . DAFNOIDINEAS. 99 TOCARiEAs. — Cryptocarrya pretiosa, Mavt. — Agatoplnjlluní aro- Maticum, Gaertn. — Raveiisara aromaíka , iion. — Persistente ó caduco, tan pronto con glándulas á manera de dientes, como sin ellas ; anteras cujas internas son introrsas j con dos celdillas abriéndose por el ápice á favor de poros. Baya al principio envuelta por el perigonio que mas luego se vuelve cúpula espesa, la cual tiene su base ceñida. T. V. Acrodiclidieas. — AcroclicUdium Ja- maicensis, Ns, — Laurus triaiidra, Sw. — Lmirv.s partiprra, Poepp.: C. T. V. 66. — Aydendroíi argenteum, Gr. — Oreodap'hne argéntea. Plan. 68. 7. Hermafroditas y polígamas de limbo perigonial articulado y caduco que tiene glándulas estaminiformes; anteras con 4 celdas de las cuales las de la serie estaminal esterior son entrorsas ; yemas incompletas. T. VI. Cinamomeas. — Cinnamomicm aromaticum, De. C. T. V., 231. Hermafroditas y las mas veces diclines unisexua- les, de limbo perigonial, tan pronto persistente como caduco por desarticulado; glándulas estaminiformes; anteras bi ó 4 loculares, cuyas interiores son entrorsas ; pedículos sosteniendo los frutos espesos y á veces algo carnosos : yemas de las ramitas completas. T. VII. Perseas. — Persea gratissima, Gr.: C. T. V., 321. 8. Dioicas solamente, 9. — Dioicas ó polígamas, 10. 9. Cuyas divisiones perigoniales son diminutas ó faltan entera- mente ; 9 hasta 18 estambres cuvas anteras de 2 á 4 celdillas son ordinariamente todas inclusas en la flor; bava situada en el tubo perigonial estendido; yema de las ramitas incompleta. T. VIII. Te- TRANTHEREAS. — Lav/riLS noHUs , L. — Cuyas divisiones perigo- niales son iguales y caducas; 9 basta 10 estambres todos fértiles, cuyas anteras con 2 ó 4 celdillas son todas contenidas por dentro de la ñor. Baya sostenida por un pedicelo desnudo ó por el tubo peri- gonial discoideo ; yemas completas. T. IX. Dafxidieas. — Dapli- nidium . 10. Con 9 estambres fértiles sin ester: es ningunos, cuyas antera* de 2 á 4 celdillas son todas introrsas; perigonio enrodado, delgado j amarillo. Baya sostenida por un pedicelo desnudo, alguna vez que otra espeso; Acemas completas. T. X. Flavifloreas. — Sassa- fras officinalis. — Laurus sassafras, L. — Mas ó menos de 9 es- tambres, anteras siempre con 4 celdillas, 11, 11 Abriéndose por cuatro poros; las flores masculinas suelen faltar de las glándulas estaminales, mientras las glándulas de las fe- meninas son caliciformes : 3 á 6 anteras interiores y sentadas; ye- mas incompletas. T.XI.1)icipelieas. — Dicyphylium caryophyl- latum, Xs. — Sobrepuestas y abriéndose por ventallas y apareadas ; perigonio persistente campanudo ó enrodado y con divisiones estre- chas ; á veces ciñe á manera de cúpula la base de la baya; yemas incompletas. T. XII. Oreodafneas.G. I. G. I. Oreodaphne.Xs.I. Ramos lampiños, pulverulento-pubescen- titos hacia la sumidad algo colorida: estigma ancho; cúpula con figura de escudo, 2. — Ramitas y panoja^ estendidas, estrigoso pu- bescentitas ; estigma diminuto; cúpula con figura de copa, 3. 2. Árbol mediano de hojas papiráceas, oblongas ó elípticas, ordi- 100 DIVISIÓN SEGUNDA. FANE ROCÍA MOS. nariamento aguzadas, obtusitas, de cara superior lisa j algo reticu- ladita, mientras en la inferior las venas principales parecen como costillas delicadamente reticuladas, largas de 3 á 10" y anchas de 1 1\2 á 3". Panojas pulverulento-pubescentitas, alampiñadas, sub- contraidas ó estendidas por la base ; pedicelos con verruguitas, ver- des y tan largos como las flores y estendidos; lóbulos perigoniales aovados ú oblongados y obtusos; anteras cuadradas de filamentos cortos, cuvos 3 interiores son biíílandulosos; nins^un estambre esté- ril; cúpula algo cóncava en lf2 de la lonjitud de la baya que es ovoi- deo globosa, con una puntita. — O. Leiicoxyloíi, Gr. — Laurus len- coxylon, Sw. — Phcehememhranacea, Macf. 3. Árbol grande, corpulento y coposo, de hojas tiesas y papiráceas, elípticas, aovadas, ordinariamente redondeadas por el vértice, lam- piñas y venoso-reticuladas : venas simulando costillas y dispuestas en redecilla visible por aml)as caras, ordinariamente con pelo si- tuado en la axila de las venas de la cara inferior; largas de 4" ú 8", sobre "2" ó 3" de ancho ; pedicelos mas largos que las flores y esten- didos: perigonio pubescentito y con lóbulos redonditos; cúpula 1/5 (le loniitud de la l)ava. ovoideo-obloníja ú oblonira v distinta del pe- (lícelo esnesado y ruü'osito. O. coriácea. Ns. Gr. II. Nectandra, Rottb. — 1. Anteras redondeadas dispuestas á manera de semiluna, 3. — Anteras oval-oblongas mucho mas largas que el tubo perigonial, cuyas 6 esteriores tienen sus celdas apareadas y sobrepuestas, 2. 2. Árbol grande, corpulento y coposo, de ramitas verdes y alam- piñadas, con hojas subcoriáceas oblongas , lampiñas , reticulado- venosas, de venas mas proeminentes por la cara inferior; panojas pequeñas pubescentitas, flojas, abiertas, pedunculadas , infratermi- nales ; pedicelos nas cortos que las flores, cuyas divisiones perigo- niales, aovado-oblongas, obtusas y pubescentitas, son tan largas como los estambres; anteras sentadas iguales y pubescentes, cuyas 3 interiores tienen 2 glándulas; hay 3 estambres interiores estériles, diminutos, subcilíndricos y sin glándulas. N. staminea, Gr. 3. Hojas lustrosas reticulado-venosas, cuyas venitas están dis- puestas á manera de redecilla por ambas caras, 4. — Cara superior mucho mas lisa; venas principales pareciendo costillas distantes y proeminentes por la cara inferior y formando arcos oVdongados, mientras las secundarias son transversales, 9. 4. De ramitas purpúreas. 5. — De ramitas nunca purpúreas, pero sí parduscas ó verdes, 8. 5. Pubescentitas, árbol grande, corpulento, coposo, y que se eleva como á 15 ó 20 varas de altura; hojas papiráceas, lanceolado-oblon- gas ó elíptico-ol)longas con una punta obtusa, lampiñas ó alampiña- das, largas de 2 á 6'', sobre 1 á 2" lf2 de ancho ; panojas estendidas pubescentitas ; perigonio tan largo como los pedicelos y cuyas divi- siones oblongas y obtusas son pubescentes ; anteras iguales sentadas, obovalo-redondeaditas ; 3 estambres estériles y con figura de ma- ceta ; cúpula corta ciatiforme, 5 veces mas corta que la l)aya ovoidea ó ao vado-globosa. JV. sanguinea, Rossb. — Laurus Borbonia, H. B. K. — N. concinna, Ns. — L. MartinicensiSyJsLoq.C T. V. 64. — DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXI Ms. — DAFISOIDÍNEAS. 101 Árbol como de unos 30' de altura con hojas coriáceas elíptico-oltloníi'ah:. o-on una punta o])tusa, lampiñas, largas de 3 ó (3" y anchas de 1 á 2" 1{2. venas preeminentes formando redecilla visible por ambas caras; panojas axilares arracimadas é inclinadas hacia abajo, pubescentitas y mas cortas que las hojas ; perigonio tan largo como los pedicelos y cuyos lóbulos oblongos y obtusos son pubescentes por dentro ; 6 es- tambres esteriores subsesiles, hay además 3 interiores esertos espa- tulados y con un filamento biglandular, todos fértiles, mientras los otros 3, estériles y diminutos, son con figura de maceta. N. coriá- cea, Gr. — Laurus coriácea j Sw. C. T. Y. 65. 6. Parduscas, subsedosas ó grises y lampiñas, *7. — Verdosas y lampiñas, 8. 7. Árbol grande, corpulento y coposo, de hojas papiráceas, lan- ceolado-oblongas ó elípticas, obtusas, lampiñas ó barbudas en la axila de las venas de la cara inferior, largas de 3 á 4"; panojas es- tendidas y subsedosas, perigonio tan largo como el pedículo, cuyos lóbulos aovado-oblongos y obtusos son subsedoso-pubescentes ; an- teras iguales; 3 estambres interiores configura de maceta; cúpula aorzada. N. exáltala, Gr. — Laurus exáltala, Sw. — Oreodaphne exáltala, Ns. C. T. V. 67. 8. Árbol grande, corpulento y coposo, cuyas hojas oblongas, de base aguzada, de vértice obtusito, con una punta pequeña y delgada, tienen la cara superior lustrosa y lampiña, mientras que la inferior provista de una redecilla preeminente es pubescente; semilla ovoi- dea bastante gruesa v muy aromática. N. ^ichiiry. Laurvs ^Icliu- rin, L. ; C. f. V. 232. 9. Ramitas purpúreas, 10. — Ramitas nunca purpúreas, pero par- duscas, 13. 10. Ramitas purpúreas alampiñadas, 11. — Ramitas purpúreas, alampiñadas ó pubescentitas, 12. 11. Árbol mediano, de hojas subcoriáceas, lanceolado-oblongas ó aovado oblongas, ordinariamente aguzadas, lampiñas desde tiernas, lisas y de cara superior no lustrosa, venas primarias, color anhum- broso. en número de 5 ú 8 en cada lado de la costilla, largas de 4 á 9'', sobre 1 ó 3" de ancho. Panojas acorimbadas desparramadas, pu- bescentitas y de pedicelos tan largos como las ñores, cuyo perigonio blanquecino tiene las divisiones ovales y tomentosas interiormente; cúpula corta en forma de escudo, distinta de la parte espesada del pedúnculo y estendida por la base de la baya globosa, tres veces mas larga que ella y de color azul oscuro. Á'^. leucatha, ^'s. — K. paluda. N. Pisi, Miq. — Zaurns Borbonia, Sw. C. T. Y. 64. 12. Árbol muy grande, corpulento y coposo, de hojas papiráceas aovado-oblongas ó elípticas, cortamente aguzadas, lampiñas, lus- trosas y lisas por la cara superior, por donde aparecen las impresio- nes de las venas primarias en número de 4 ó 6 de cada lado de la costilla, mientras que son preeminentes por la inferior, con venas secundarias delgaditas; panojas axilare^pul»escentitas y mas cortas que las hojas; anteras iguales sentadas, redondeaditas , cuyas inte- riores son biiilandulosas; hav estaminodes. N. membranácea, Gr. — Laurus rnembranacea^ Sw. 102 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 13. Árbol primoroso y grande cujas ramas y ramitas lampiñas llevan hojas pecioladas, elíptico-oblongas, aguzadas, coriáceas lam- piñas, de cara superior lustrosa v peninervia , con venitas dis- puestas en redecilla, racimos terminales algo acorimbados, mas cortos que las hojas; flores pediceladas con lacinias perigoniales algo desiguales, todas obovaloblongas y obtusas, esteriormente pu- bescentes é interiormente glanduloso-velludas, cuyas esteriores son algo mayores ; 6 estambres esteriores menores y de anteras entror- sas y 3 interiores estrorsas: 3 filamentos de cada serie tienen por la base una glándula globo&a; hay 3 estaminodios alesnados pelitiesos. JV. cigv.a, A. Rich., Fl. Cuba. Familia 48.— HERNANBIACEAS. —Árboles bastante al- tos, densamente ramosos, con las ramitas algo rollizas, con muchas hojas simples, alternas, pecioladas, subabroqueladas, entegérrimas y sin estípulas. Flores acsilares acorimbadas, hermafroditas, solita- rias, envueltas en un calículo tubuloso, bíñdo y deciduo, ó monoicas temadas adentro de un involucro tetráíilo, cuyas laterales masculi- nas son cortamente pediceladas y desnudas, mientras la del medio, sentada y caliculada, es femenina. Las masculinas constan de un perigonio coroliforme bipartido, cuyas lacinias son en dos series, las interiores estando mayores: 3 estambres opuestos á los segmentos esteriores, de filamentos cortos, erguidos, con la base dilatada, acompañados de una glándula pediculada y sub-coherenté; anteras biloculares, con las celdas situadas por la márjen del conectivo, ion- jitudinalmente dehiscentes. Las femeninas se componen de un pe- riantio tubuloso ceñido por un calículo muy corto, aorzado y caduco, de tubo ventrudo , con la garganta estrechada y coherente con el estilo, cuyo limbJ 8 partido con las lacinias biseriadas; 4 estambres rudimentarios, glanduliformes insertos en las fauces y formando un anillo adherido con el estilo; ovario sentado, libre y unilocular, con un óvulo único, colgante del ápice de la celda y anátropo; estilo terminal, simple, elongado, coherente con las fauces del perigonio, claviforme por el vértice y terminado por un estigma infundibulifor- me, franjeado y 4 lobo. Drupa monosperma 8 costilluda, encerrada en el tul)o del cáliz hinchado, ventrudo y esponjoso interiormente, semilla inversa subgiobosa, de testa crustácea, con el rafe anular, embrión sin endospermo ortótropo, con los cotiledones máximos lobados V torulosos; raicilla corta y superior. Hernandia sonora, L: C. T. V. 502. ' Familia él'.— TIME LE ACEA8 ó TÍMELE AS. — Arbustos ó árboles de mediana altura, con hojas simples, enteras, alternas, y alguna vez que otra opuestas, coriáceas y pecioladas; flores apéta- las, ordinariamente hermafroditas, pero sin embargo bastantes ve- ces unisexuales por causa de aborto y frecuentemente provistas de un involucro, dispuestas en grupos axilares que salen antes de las hojas y algunas veces en especie de cimas terminales. Están forma- das de un perigonio coroliforme, colorido, monófilo y tubuloso, cuyo limbo con 4 á 8 divisiones mas ó menos profundas, dispuestas en dos series y siempre de estivacion empizarrada, está algunas veces 4 dentado y provisto alguna vez que otra de 4 escamas petaloideas,. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXII. POLIGONOÍDEAS. 103 situadas por la base de los lóbulos ó en la garganta perigonial; 4 á 8 estambres hay pegados por el interior del tubo ; pistilo compuesto de un ovario único y supero, ordinariamente solitario lateralmente pegado y terminado por un estigma subsesil. Fruto abajado ó dru- páceo monospermo; semilla invertida, así como el embrión conte- nido en un endospermo delgado que suele faltar bastantes veces, derecho y cuyos cotiledones plano-convexos son á veces lobados y como ganchosos, de raicilla corta y superior. G. l.LAGY.T\:AUntearía,L8Lmk. — ¿aphnelagetfa, Sw. :C. T. Y.39. G. II.Daphnopsis, Mart. — 1. Arbustos de ramitas pubescentitas que llevan hojas de dos colores, 2. — Arbolitos como de unos 20 á 30' de altura, cuyas ramitas lampiñas tienen hojas de un solo color siempre, 3. 2. Papiráceas, lanceolado-oblongas, de cara superior glabra, mientras la inferior es pubescentita, largas de 3 ó 4", sobre 10 á 18'" de ancho, cuya base va adelgazándose en peciolo corto, mientras el vértice es tan prontí) puntiagudo como obtuso; pedúnculos sim- ples de 1 á 1" 1[2 largos, llevando flores cortamente pediceladas, sedosas, blanquecinas, de tubo perigonial tres veces mas largo que el limbo, cuyos lóbulos lanceolados y puntiagudos son encorvados; baya ovoidea. D. Swartzii, Meisn. — Dcqjhne occidentalis, Sw. — Haragasseria Swartzii, Gr. 3. Flores masculinas de tubo perigonial, con figura de maceta y 3 ó 4 veces mas largo que el limbo, 4. — Flores masculinas cuyo tubo perigonial, ni filiforme ni en maceta tampoco, es solamente 2 Teces mas largo que el limbo, 5. 4. Hojas papiráceas ó subeoriáceas, lanceolado-oblongas, elíptico- lanceoladas ó elípticas, ordinariamente puntiagudas, largas de 3 á 4" y cortamente pecioladas; flores cimosas y en cabeza á la par, blanco-seríceas, cuyos pedúnculos sonbi ó tricótomos, sentadas, cu- yas femeninas están por la periferie, mientras las del centro, cual- quiera que sea su sexo, están siempre menos desarrolladas; perigo- nio de las femeninas infundibuliforme, y por último can^panudo, con anteras a))oríadas y el estigma algo eserto; baya elipsoidea, larga de 4'", puntiaguda y tan larga como el pedíc^o que la lleva. D. ti- ni folia, Gr. — Daphne tini folia, S^y. — Nordmaunia tinifolia, Titch. — Hargasseria tinifolia, Endl. C. T. Y. 40. 5. Hojaj? subeoriáceas, lanceolado-oblongas y lampiñas, venosas, ordinariamente mas estrechas que en la especie anterior: flores ci- mosas carnoso-pubescentes, sentadas ó cuyas femeninas son sub- sesiles, las del centro menos desarrolladas que las de la circunfe- rencia; perigonio de las femeninas embudado y por fin campanudo, con los lóbulos obtusitos y doblados hacia adentro; pedúnculos á ve- ces dicótomos; baya elipsoidea, puntiaguda y mas larga que su muy cortito pedicelo. D. Carihoea, Gr. — D. tinifolia, Meisn. C. T.V. 40. CLASE :KXII. — PQLIGO^^OÍDhL\S. Familia 50. — FOLIGOKAcFAS ó POZIGÓXFÁS. —Vlan- fas herbáceas con raiz perpendicular ma.-^ ó menos gruesa y carnosa ]04 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. Ó bastantes veces fibrosa, ó arbustos y basta árboles algunas veces bastante grandes, con liojas sencillas enteras, mas ó menos palmea- das ó lobadas, de figura y de tamaño muy variados, siempre alter- nas, cuyo peciolo mas ó menos largo está provisto por la base de una especie de vaina membranácea estipular que ciñe al tallo y á los ramos, por encima de cuyos nudos ó especies de coyunturas mas ó menos crecidos está situada y que se llama ocrea, de prefoliacion arrollada hacia afuera: fiores apétales, ordinariamente bastante pequeñas y dispuestas en grupos axilares, en espigas y ó en panojas terminales, que constan de un perigonio comunmente coroliforme, monófilo, cuyo limbo partido en 4 ó 6 lacinias ó lóbulos mas ó me- nos profundos, y alguna vez que otra dispuestos en dos series, cuyos esteriores están algunas veces provistos de un tuberculito glandular situado por en medio de la base esteriormente, de estivacion imbri- cada. De 4 hasta 9 y 10 estambres insertos en el fondo perigonial y hacia la base de las divisiones á las cuales están opuestos, y en dos series, cuya interior es incompleta, con las anteras estrorsas, mien- tras la serie esterior las tiene introrsas, biloculares y que se abren lonjitudinalmente. Pistilo compuesto de un ovario único, libre, uni- locular, con un huevecillo único y basilar anátropo, cuyo vértice lleva 2; 3 ó 4 estilos libres ó soldados entre sí, á veces muy cortos, terminados por estigmas simples ó plumosos. El fruto es una cariop- side ó un aquenio triangular ú oval mas ó menos encerrado en el perigonio persistente, que algunas veces vuelto carnoso simula una drupita, cuya semilla derecha contiene un endospermo farináceo, frecuentemente delgado y de un embrión derecho ó arqueado situa- do lateralmente en él, con la raicilla vuelta hacia arriba. Análisis dicotómica de Jas sut -órdenes, tribus y sub-tribus. 1. Flores hermafroditas ó polígamas, 2. — Flores dioicas polian- dras cuyo perigonio femenino es 6 partido, con los lóbulos interio- res conados en tubo triquetro piramidal, adherente con el ovario incluso en él; ocrea iejítima ninguna. Sub-órden I. Symmerieas. 2. Siempre hermafroditas y sin involucro; perigonio 3 partido cuyo fructífero es seco; estambres 8; ovario libre y triquetro, de óvulo colgante, con el funículo basilar, libre y larguito,. por último erguido; ocreas lejítimas nulas ó apenas pronunciadas; tallos las mas veces fruticosos y zarcillosos. Sub-órden 11. Beunnichieas. — Hermafroditas ó polígamas con ó sin involucro, 3. 3. Con involucro; ocrea Iejítima apenas pronunciada; el involu- cro tubulado y gamófilo ó raras veces prolífilo envuelve á una ó al- gunas flores ; perigonio 6 partido; estambres 9, ovario libre, hue- vecillo basilar sentado y ortótropo, con la semilla derecha, embrión inverso con la raicilla superior y encerrado en un endospermo muy poco desarrollado. S.-órd. III.Ébiogoneas. — Hojas sin involucro, variamente ocreadas; estambres 1-9, frecuentemente 6-8 3^ rarísi- mamente 12-17; ovario libre ó mas rara vez adherid por su base con el perigonio; óvulo basilar erguido. S.-órd. IV. Poligoneas, 5. DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXII. — POLIGONOIDEAS. 105 5. Aquenio 2-4 angular cuyos ángulos están dilatados en ala ó en cresta; embrión axil : flores casi siempre hermafroditas. T. I. Ple- EIGOCARPEAS, 6. — Aquenios con los ángulos sin alas ó rarísima- mente provistos de una : embrión lateral v mas rara vez axil ; estam-bres deñnidos en número de 6-9, rarísimamente 1-5. T. II. ApTEROC ARPEAS. 7. 6. Ovario 4 gono ; estigmas 4 cabezudos; aquenios triquestros con los ángulos alados ó dentado-crestados, erizados ó dilatados en una membrana avejigada: perigonio 5 partido marcescente ó acres- cente; estambres 12-17. Sub-tribu I. Galilgoneas. — Ovario 2-3 gono; estigmas 2 ó 3; aquenio lenticular ceñido por una ala ó tri- quetro 3 alado, cuyas alas son entegérrimas y desnudas; perigonio 4-6 partido; estambres 6-8-9. Sub-tribu II. Rubaruareas. 7. Flores hermafroditas ó polígamo-dioicas , 8. — Flores monoi- cas ó dioicas, 9. 8. Flores sola y únicamente hermafroditas, de perigonio 3-5 par- tido, con lóbulos sub-iguales y conniventes por encima del fruto, conformes ó cuyos tres esteriores son á veces aquillados ó alados ; aquenio libre lenticular ó triquetro 1 locular encerrado en el peri- gonio seco, mas raras veces eserto. EuP0LIG0^■EAS. S.-T. III. — G. I. Hermafroditas ó polígamo-dioicas, 9. 9. Perigonio marcescente con ó sin callos ó tuberculitos , 4-6 partido, cuyos 2 ó 3 lóbulos interiores acrescientes erguido-coni- ventes encierran el fruto, mientras los esteriores apenas agudos son llanos y reflexos; aquenio triquetro raramente lenticular. Rumieas, S.-T. lY. G. III. — Perigonio carnudo y formando una especie de drupa, pero por fin volviéndose marcescente al desecarse, 5 partido y por último cerrado; aquenio incluso frecuentemente adherido con la base perigonial trígono ó sub-globoso, semi-trilocular ; semilla asurcada, 3-6 loba, de endospermo las mas veces ruminado. Sub- tribu V. Coccolobeas. G. II. 10. Flores monoicas de perigonio femenino 6 fido, cuyos 3 lóbu- los esteriores conados en tubo triquetro, de ápice 3 dentado, en- cierran el fruto, los dientes del vértice se vuelven espinitas ó salen del centro de la quilla, mientras los interiores son mucho menores derechos. Sub-tribu. YI. Ceratogeneas. — Flores dioicas mas ra- ramente hermafro ditas; perigonio fructífero seco, 6 ó mas raras veces 3 par tido, con los 3 lóbulos esteriores crecidos y aliformes, erguidos y membranosos, mientras que los anteriores menores están subinclusos ó alguna rara vez son nulos; aquenio libre incluso ó subeserto , triquetro ó azurcado^ trílobo, 1 semi-trilocular, de endospermo ruminado. Sub-tribu. YII. Triplarideas. G. I. PoLiGONüM, L. — 1. Hojas conpuntitos transparentes; cáliz provisto de glándulas, 2. — Hojas sin puntitos transparentes j perigonio sin glándulas, 3. 2. Yerba de tallo lampiño, con hojas lanceoladas , aguzadas, pes- tañositas, ocrea tubular pestañosa; flores en racimos erguidos, del- gados é interiormente interrumpidos; pedicelos por fin esertos; es- tambres 8; estilos 3; aquenio triangular, lustroso. P. acre^ Kth. : C.T. Y.,27. lOG DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 3. De tallo pubescente ó alampiñado ; ocrea cerdosa j con pesta- ñas largas, 4. — Yerba enteramente lampiña; ocrea sin cerdas ni pestañas tampoco, 5. 4. Hojas lanceoladas ú oblongo-lanceoladas, aguzadas por la base, elongadas é insertas por arriba de la base de la ocrea tubular j apre- tada, cujas franjas tiesas son largas de 6 á 8'"; flores rosadas en racimos erguidos filiformes ó delgaditos ; estambres 6 y á veces 8 ó 5 estilos, 2 reunidos por la base ; aquenio biconvexo y lustroso. P, acumiiiaUtm, Kth. — P. harhatum^ Mey. 5. Yerbas de hojas lanceoladas ú oblongo-lanceoladas, aguzadas y pecioladas, cuyo peciolo sale por arriba de la base de la ocrea tu- bular; flores color de rosa en racimos erguidos filiformes; estam- bres 6-8; estilos 2 ó 3 ; aquenio bi-convexo ó triangular y lustroso. P. glah'atum, W. G. II. CoccoLOBA, Jacq. — 1. — Aquenio saliendo un poco por afuera del limbo perigonial carnudo ; hojas papiráceomembranosasy pegadas en la base de la ocrea, 2. — Aquenio enteramente encerrado en el perigonio vuelto carnoso, hojas coriáceas insertas en el dorso de la ocrea, 3. 2. Arbolito de 20 á 25' de altura algo mas ó menos, muy ramoso, con hojas papiráceas, elípticas ó elíptico-oblongas aguzado acumi- nadas por ambos estremos, ó algo redonditas por la base, largas de *7 á 4" sobre 2 1^2 ó 2 de ancho ; nervaduras cuyos surquitos son vi- sibles por la cara superior, mientras que son proeminentes por la inferior, algunos nervios algo salientes se ven por ambas caras ; flores amarillentitas en espigas simples, largas de 3 á 4c" en forma de varita, ordinariamente algo mas gruesas por el vértice en donde están aglomerada-B las flores; base del perigonio 5 partido envuelta porbrácteas; estambres esertos; baya blanca ovoidea larga de 2'"^ 1[2 y cuyo vértice está superado por el ápice cónico del aquenio negro. C. nivea, Jacq. — C . excoriata : C. T. V. 574-. 3. Pedicelos de las flores mas largos que las brácteas y con un nudo ó una articulación por debajo del ápice, 5. — Pedicelos de las flores un poco mas largos que las brácteas diminutas y con un nudo en el ápice, 4. 4. Árbol grande, de madera jaspeada, con hojas anchamente elípticas, obtusitas ó con una puntita, redondeadas ó algo recortadi- tas por la base, lampiñas, de cara superior pulida y lustrosa, largas de 8 á 5" sobre 5 á 3" de ancho, cuyo peciolo tiene 12 á 18"', con la ocrea aplicada, estriada y larga de 6 á 8'", cara inferior con las ner- vaduras algo proeminentes; racimos simples, flojos, subsentados, largos de 4 á 2" li2, con los pedicelos simples, distantes, estendidos ó cabizbajo de 2'" de largo; tubo perigonial oval-semi-globoso, an- cho de %'" y mas largo que los lóbulos pubescentitos ; estambres sub-iclusos y cortos ; estilos esertos ; baya aovado-cónica larga de 8'" sobre 6"' de ancho; aquenio fibroso. C. zelra^ Gr. 5. Hojas acorazonado-orbiculares , 6. — Hojas redondeaditas, lampiñas, cuyas nervaduras y venas aparecen en la cara superior por los surquitos que forman, mientras que son proeminentes por la inferior; cortamente pecioladas y anchas de 24 á 8'" ; ocrea hendida DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXII. POLIGONOIDEAS. 10" ,v redondeada; racimos compuestos cuyos pedicelos son casi tan largos como las flores y articulados hacia en medio, perigonio largo de Y" : baya ovoidea larga de 3'" . Árbol bastante grande y alto. C. lat'} folia, Lam. 6. Hojas frecuentemente mas anchas que largas, lampiñas, puli- das con las nervaduras algo proeminentes por ambas caras, largas de 6-3" sobre ^t-o" de ancho, cortamente pecioladas y cuyos nervios no son proeminentes; ocrea alampiñada; racimos simples filiformes largos de 8 á 6", con pedicelos amanojados articulados hacia el medio y mas largos que las flores, blanquecinas y de 1'" 1\2 de diá- metro: bava ovoidea larí^a de 8-6'" v de color moreno azuladito. Árbol mediano ó bastante grande v muy ramoso. C. íizifera, Jacq.: C. T.y.,^0. Árbol bastante alto y poco ramoso, de hojas subsesiles, alampiña- das y ásperas por la cara superior en los lugares correspondientes con los surquitos de las venas, ari'umbroso-pul»escentes inferior- mente y en especial anchas de 6-2" con peciolo espeso, largo de 2 á 3"', y adherido á la ocrea estendid a corta y arrumbroso-velluda ; racimos simples con pedicelos amanojados mas largos que las flores pequeñas y verduscas; baya ovoido-oblonga C. ¡^nhescens, L. Gr. III. PtUMEX. 1. Flores de perigonio avejigado ó como vesi- culoso, 2. — De perigonio nunca jamas avejigado, 3. 2. Planta herbácea de tallo como de 6" algo mas ó menos, con hojas sub-carnosas pecioladas aovadas ó sub-deltoideas, obtusas ó aguzaditas y acuñaditas á la vez por la base acorazonada y sub-has- tada, cuyas superiores son mas estrechas y casi sentadas; racimos simples ó apanojados y áfilos, con 2 ó 3 grupitos de 2 á 5 flores, apartados; pedicelos unifloros ó con dos flores conadas por el dorso y situadas en su ápice: valvas mayores del perigonio tenuamente reticuladas, sub-orbiculares, desiguales, con ó sin callos, de márjen entera, acorazonadas: flores hermafroditas pocas, mezcladas con las masculinas. R. vesicarius. L. — LapatJium te6Ícarmm,lSlcejich.: C. T. Y. 515. 3. Tallo estriado como de 1' de largo, saliendo de una raiz per- pendicular, carnuda, del tamaño del dedo pulgar, poco ramoso; ho- jas radicales largamente pecioladas, mientras las caulinares lo son muy poco, ovales sub-acuminadas, llanas, redondeadas por la base y con la márjen dobladita hacia afuera y unduloso-festoneaditas, de cara superior lampiña, mientras la inferior es finamente pubescen - tita, peninervias y bastante grandes: las del tallo casi lanceoladas y pequeñas; flores en racimos apanojados, áfilos y mas cortos que las hojas, formadas de verticiliossub-confluyentes densamente mul- tifloros : de pedicelos 2 á 3 veces mas largos que el perigonio, bas- tante grandes y con lóbulos oval-obtusos, cuyos interiores dos veces mavores que los esteriores peninervios integerrimos son sin callos. R. lat'ifoliiim, Knth.: C. T. Y. 804. — Yerba vivaz de raiz carnuda, derpend ¡ciliar y del tamaño del dedo, cuyo tallo derecho se eleva como á r l\2 ó'á2' de altura ; hojas radicales alongadas, unduloso- rizadas, largamente pecioladas au'uza pas por ambos estremos, puntiagudas, oblojigas, y l;astante grandes, mientras las caulinares 1C8 DIVISIÓN SEGUNDA. FA.NERÓGAIsIOS. lanceoladas v pocopecioladas son lineares en la parte superior ó en los ramos ; flores en panojas follosas por la base y por fin densas y sub-afilas, y formadas de verticilos aproximados ; divisiones perigo- niales no muy grandes, anchamente ovales, sub-acorazonadas, obtusas con redecilla proeminente,entegerrimas ó apenas dentaditas por la base y todas callíferas, R. crispus, L. — Zajjathnm crispum, Lam.: C. T. V., 804. CLASE XXIII.— QÜEXOPODÍNEAS. Familia 51.— QÜBNOPODIACEAS , SALSOLACEAS , ATRIPLICEAS y QUENOPODIEAS. — Plantas herbáceas frútices y raras veces arbustos lampiños pubescentes ó lanados ; de tallo cilindrico ó anguloso, continuo y foliáceo ó articulado y fre- cuentemente afíleo; hojas simples alternas y raras veces opuestas, sentadas ó pecioladas, las mas veces membranáceas y dilatadas, otras veces carnudas, suculentas, semi-cilíndricas ó cilindricas ; en el primer caso son entejérrimas dentadas incisas, picadas ó sinua- das, mas ó menos venosas, lampiñas, glaucas y mas ó menos pubes- centes sin estípulas ; ñores diminutísimas, regulares y hermafrodi- tas, alguna vez que otra polígamas, y rarísimamente declines ó unisexuales por causa de aborto, sentadas ó pedunculadas, solita- rias ó agrupadas, tan pronto axilares como apanojadas, espigadas, arracimadas y terminales; acompañadas de 2 brácteas ó de 2 brac- teitas, raramente contiguas, frecuentemente con forma de quilla, cóncavas, ordinariamente foliáceas y raras veces deciduas, suelen faltar algunas veces. Periaonio con 5 y rara vez 4-3 v hasta 2 sé- palos mas ó menos reunidos entre sí por la base, ordinariamente iguales, lampiños ó velludos, herbáceos, verduzcos, los cuales des- pués de la fecundación se quedan secos ó se vuelven carnudos con ó sin púas, de estivacion imbricada; estambres 5, raras veces en nú- mero menor por causa de aborto, insertos con mayor frecuencia en el fondo del perigonio, ordinariamente todos fértiles y opuestos á las divisiones perigoniales y cuyos filamentos son raras veces mas largos que ellas, subalados y filiformes; libres ó algunas veces reu- nidos por la base en una especie de cúpula corta, con anteras bilo- culares erguidas ovales ú oblongas, introrsas, abriéndose por una grieta lonjitudinal,y pegadas por la base de su dorso ó por el ápice; de celdas opuestas y trabadas á veces por la base, mas rara vez se- paradas por la base y el vértice á la par ; conectivo angosto, no rara vez terminado en un apéndice erguido mas ó menos dilatado, peta- loideo ó con figura de cartucho ó avejigado ; granitos polínicos, glo- bosos V ovales á la par; los estaminodios ó estambres absortos que se observan en algunos pocos géneros son diminutos, situados entre los filamentos y alternan con las divisiones perigoniales; se halla ordinariamente un nectario situado entre los estambres y el pistilo, el cual es tan pronto semi-anular y gruesecito, como ciatiforme car- nosito ó membranáceo, pero que suele faltar frecuentemente ; ova- rio único ovaloblongo o deprimido y globoso á la vez, mas frecuen- DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXIII. — QUENOPODÍNEAS. 109 teniente libre que soldado con el tubo perigonialy siempre unilocular, huevecillo único tan pronto sésil j sentado en el fondo de la celda, como sostenido por un funículo corto, horizontal 6 colgante y anfí- tropo, cuyo micrcipilo mira hacia la base, la periferie ó el vértice del ovario; hay comunmente dos estilos, raras veces son tres, termina- les y tan pronto larguitos como cortos, subulados, filiformes, mas ó menos aproximados por la base y divergentes por el ápice, cuva su- perficie esterior lleva el estigma; algunos géneros tienen un' estilo único que se termina por 2-3 y rara vez 4 estigmas lanceolados, comprimidos ó semi-cilíndricos. Fruto monospermo envuelto en el perigonio, indehiscente mútico ó apiculado; de pericarpio membra- náceo utriculado y perteneciendo á un aquenio, otras veces á una cariopside y rarísimamente á una baya; semilla horizontal ó verti- cal erguida ó inversa, lenticular ó reniforme, de tegumento tan pronto doble y con testa, crustáceo ó coriáceo y endospleura mem- branácea, como simple, delgado y membranáceo. Endospermo copioso, poco ó nulo, ordinariamente farináceo ó rara vez sub-car- noso; embrión homótropo, las mas veces encorvado ó anular, peri- férico y ceñiendo al endospermo mas ó menos perfecta y completa- mente, otras veces es plano ó en forma de espiral; raicilla situada cerca del ombligo; plumula inconspicua; cotiledones planos y con- vexos á la vez, angulosos. Análisis dicotómica de ¡as tribus ij siih-tribus. 1. Embrión anular S. Ord. I Ciclobeas, 2. — Embrión dispuesto en espiral S. Ord. II. Espirolobeas. II. 2. Tallo articulado y frecuentemente desprovisto de hojas, mas ó menos carnudo y suculento; flores hermafroditas todas conformes y alojadas en cavidades que se hallan en el raquis ó en los artejos sencillos ó dobles. Tr. I. Salicornieas. — Tallos continuos y siempre provistos de hojas, 3. 3. Flores hermafroditas y raras veces polígamas, todas confor- mes ó con la misma forma, 6. — Flores diclines, es decir, unisexua- les ó polígamas, 4. 4. Cuyas masculinas tienen formas diferentes de las femeninas ó son dimorfas, cuyo perigonio se halla frecuentemente reducido á 2 ventallas ó divisiones ; pericarpio libre, (> algunas veces adhe- i'ente, comprimido, cuyas semillas tienen el tegumento doble ó sim- ple, en el primer caso la testa es crustácea. Hojas membranosas llanas, mas ó menos triangulares y bastadas. Tr. II. Espinacieas, 5. 5. Semilla con tegumento doble. S. Tr. I. Atkipliceas. Atriplex. Spinacia. — Semillas de tegumento simple o único. S. Tr. II. Eurotineas. 6. Hermafroditas ó polígamas, 7. — Siempre polígamas. 8. "7. Hojas llanas o lineares membranáceas, raras veces carnuditas y semi-cilíndricas; jjericarpio lii)re ; semilla de tegumento sencillo. Tr. III. Canfohosmeas. 8. 8. Hojas llanas membranosas mas ó menos triangulares y rom- boideas; fruto ordinariamente libre, de semilla con tegumento do- lio DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. ble cuyo esterior es por lo regular crustáceo . Tr.IV.QuENOPODiEAs ó Anserineas, 9. — Hojas coriáceas, llanas y lineares; fruto adhe- rente cuyo pericarpio es adherente y confundido con el tegumento simple de la semilla. — Tr. V. Corispermeas, 10. 9. De semilla horizontal. S. Tr. V. Beteas. Chenopodhün. — De semilla vertical. S. Tr. II. Bliteas. Blitum. 10. De semilla vertical. S. T. I. Panderieas.' — De semilla ho- rizontal. S. Tr. II. Kochieas. 11. Tallo continuo con hojas suculentas y vermiculares; flores hermafroditas todas conformes y con bracteitas; pericarpio libre y raras veces adherente; semilla con dos tegumentos cuyo esterior e"s crustáceo, embrión enrollado en espiral sobre un mismo plano. T. VI. SuadeasóScedineas, 12. — Tallo continuo ó articulado con hojas su- culentas semi-cilindricas ó cilindricas; flores hermafroditas confor- mes ; pericarpio delgado y apenas libre; semilla de tegumento sencillo y membranoso ; cuyo embrión está enrollado en espiral en- cima de unos planos, de manera que figura un cono.T. VIL Salso- leas, 13. 12. De semilla vertical. S. T. I. Eschanguineas. — De semilla horizontal. vS. T. II. Eschobericeas. 13. De semilla horizontal. S. T.I. Sodceas. So2sola. — De semilla vertical. S. T. II. Anabasoías. S.-T. Beteas. Chenopodium, L. 1. Embrión incompletamente anu- lar; hojas con glandulitas, 3. — Embrión completamente anular ; hojas sin glándulas, 2. 2. Deltoideo-aovadas con dientes algo desiguales ; espigas axila- res ó terminales abiertas ó flojas; perigonio un poco aquillado y que no encierra enteramente el fruto, de semilla orlada y opaca. C. mu- rale, L. 3. Yerba anual de tallo asurcado, ramosísimo, alto de 1' 1|2 hasta 2', derecho y erguido, cuyos ramos estendidos llevan hojas algo pe- cioladas, derechas lanceolado-oblongas, ó espatuladas, sinuoso-den- tadas cuyas superiores son enteras y casi sentadas y lineares, de un color verde bastante subido; flores en racimos axilares, derechos, largos de unas 2" y tollosos ; perigonio fructífero apretado contra el fruto y nunca con figura de quilla; semilla redondeada lisa, lustrosa y negra. C. amhrosioides, L. C. simtidatiim, Sieb.: C. T. V., 826. Plañía herbácea perenne, de tallo cuya base es algo leñosita, dere- cho ramosísimo y que se eleva á 2 ó 3' de altura, anguloso, cuyos ramos mas ó menos rojizos y lampiños llevan hojas pecioladas, de- rechas y erguidas, lanceoladas y oblongas á la vez ó elíptico-oblon- gas, cuyas inferiores son sinuadas, aguzadas por ambos estremos. Flores en racimos largos axilares ó terminales, delgados densifloros, cuj^o perigonio fructífero está aplicado al fruto perfectamente, nunca con figura de quilla estilo trífido, semilla redondeada lisa y lustrosa. C. anthelminticum, L.: C. T. V., 827. Familia 52. — BATIBEAS. — Vejetales fruticosos que se crian en los sanitrales y lugares anegados de cuando en cuando por las aguas del mar, de tallo derecho, ramoso, que se eleva á 2 ó 3' de altura lo mas, con hojas opuestas suculentas, y muy dobles, sin es- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXIII. — QUEXOPODÍNEAS. 111 típulas, sentadas ó apenas pecioladas; flores dioicas amentáceas des- nudas, en amentos o especie de conos oblongo-cilínd ricos apanojados ó no, axilares ó terminales. Las masculinas constan de 4 estambres que alternan con algunas escamas membranosas, las cuales están inclusas en un involucro delicado y bífido é insertas por la base de una bráctea orbicular reunida por los bordes con las vecinas y for- mando así los conos y cuvo ápice está doblado por afuera, son eser- tos y de filamentos aplanados que llevan anteras bi-locularcs lonji- tudinalmente dehiscentes; los amentos femeninos están formados de flores compuestas de una simple bráctea que sostiene el pistilo semi- anidado en el eje carnudo del cono un poco 4 seriado, y sin involu- cro; ovario 4 locular, coronado por el estigma bi-lobo, con un hue- vecillo basilar y anátropo en cada celdilla; fruto suculento abayado, de endocarpio coriáceo, cuya semilla de testa membranosa contiene un embrión simplemente arqueado , con cotiledones carnosos y grandes, y una raicilla corta, cónica y apropiada á la forma simé- trica de la semilla, endospermo nulo. Batis marithna, L.: C. T. V., 472. Familia b3. — BAjSFLFAS ó B A SEL A CB A S. — Vlanisis herbáceas ó algunas veces matas de tallos ordinariamente trepado- res, volubles frecuentemente por la derecha, larguísimos, mas ó menos delgados y ramosísimos, con hojas simples mas ó menos pe- cioladas, bastante dobles y á veces carnosas, sin estípulas, ordina- riamente alternas, y alguna vez que otra opuestas, lampiñas comun- mente verdes, pero alguna rara vez rojas, mas ó menos grandes y de forma variada, enteras; flores pequeñas pediceladas ó sentadas, solitarias ó en espigas axilares simples ó ramosas, delgadas y flojas, que constan de un perigonio doble, carnoso ó membranoso, lampiño comunmente colorado, coroliforme y persistente, cuyo esterior mas ó menos soldado por la base con el interior es bi-partido de divisio- nes ó sépalos casi opuestos, iguales derechos ó abiertos y estendi- dos. y por fin secos ó abayados con una ala ó quilla en el dorso ó sin ella ; mientras que el interior mas ó menos envuelto por el primero es quinquefido ó 5 partido, cuyas lacinias profundas simulan á veces sépalos iguales ó desiguales, derechos y raras veces abiertos ó es- tendidos, y de estivacion empizarrada; los estambres son 5, períji- nos y salen de la base, ó del centro de la parte interior del perigo- nio, ó mas bien hipójinos é interiormente soldados entre sí y con el perigonio á la vez, á cuyos lóbulos están opuestos, inclusos ó poco salientes, con filamentos alesnados y filiformes, mientras su parte inferior es ensanchada, de anteras biloculares, aovadas ó asaetadas, introrsas y algunas veces recostadas ó estrorsasy lonjitudinalmente dehiscentes. Pistilo con ovario único aovado ó casi trígono, libre, unilocular, uniovulado, cuyo huevecillo fijo en el fondo de la celdi- lla esanfítropo; lleva en su vértice un estilo simple, cortito, raras veces prolongado y terminándose por tres estigmas algo separados, engrosados hacia el ápice, obtusos ó bífidos, algunas veces hay un solo estigma trílobo ó casi trílobo y cabezudo, mas rara vez simple; fruto monospermo a([ueniforme envuelto por el perigonio ya seco bialado ó sin alas, ya vuelto carnudo y abayado; pericarpio crustá- 112 DIVISIÓN SEGUNDA. GANERÓGAMOS. ceo, cartilajinoso ó membranoso, evalvo ó sin ventallas, algunas ve- ees adherente á la parte interior perigonial; semilla vertical aovada ó casi globosa, con testa membranosa, cuyo endospermo abundante () escaso está dividido en dos masas aplicadas al centro de la espira, otras veces es anular ó cuya figura es intermedia entre la ganchosa y la de semi-lunar, gruesecito v periférico; embrión de cotiledones plano- convexos y algunas veces casi foliáceos cuya raicilla descen- dente se dirige hacia la base cárpica. S.-órd. 1*. Baseleas. Endospermo casi nulo, escéntrico ; embrión en espiral. — Basella rubra. B. cordifoUa : C. T. V. 680-681. S.-órd. 2: Anrederas. Endospermo manifiesto y regular, cen- tral: embrión anular. Anrederas scandens. DevenisMa hemostáti- ca :'C. T. V. 129. Familia 54. — FIT0LACACEAS. — Ne]QÍ2i\e^ herbáceos ó sofruticosos, las mas veces lampiños, cuyos tallos cilindricos ó irre- gularmente angulosos, derechos ó inclinados son continuos, foliosos y llevan hojas simples alternas, rarísima vez sub-opuestas, sentadas ó pecioladas, de limbo cuya base se va dilatando y aguzando en pe- ciolo, membranosas ó dobles y como carnudas, anchas ó angostitas, mas frecuentemente entegérrimas, raras veces envainadoras, denti- culadas y peninervias, sin estípulas ó con dos estípulas libres y si- tuadas en la base de los peciolos, subuladas ó aguijonosas, deciduas ó persistentes. Flores regulares ó sub-irregulares, hermafroditas ó raras veces dioicas, pediceladas ó alguna vez que otra sentadas y dispuestas en espigas, en racimos ó en corimbos axilares ó termina- les y 'opuestos á las hojas; las flores están acompañadas por tres brácteas ó bracteitas, raras veces dos, persistentes ó caducas, cuya inferior es con bastante frecuencia mayor que las laterales aproxi- madas, de las cuales á veces está un poco apartada. Perigonio for- mado de 4 á 5 sépalos, mas ó menos reunidos entre sí por la base, ordinariamente iguales, pero alguna vez que otra desiguales, las mas veces lampiños, herbáceos, de márjen frecuentemente membra- nosa, á veces colorados por la cara interior, quedándose en el mismo estado después de la florescencia que antes de ella. La corola suele faltar con bastante frecuencia y cuando existe se inserta en la parte inferior de la base calicinal, cuyos pétales, en igual ó en menor nú- mero que los lóbulos calicinales, alternan con ellos, son libres, di- minutos y angostamente unguiculados ; estambres sub-hipójinos in- sertos en un disco hipójino que ocupa el fondo del cáliz ó pegados en la base de un carpóforo diminuto, su número es tan pronto igual al de los sépalos, con los cuales alternan entonces, como muchos cuyos interiores están en ese caso opuestos á ellos y los interiores alter- nos, raras veces están en haces ó andróforos alternos, mas rara vez aun se hallan en número indefinido y sin orden ninguno ; filamen- tos filiformes subulados y de base oval ú oval-triangular, libres ó soldados entre sí inferior-mente y formando así una especie de cú- pula ó de nectario fimbriado ó entero, y se terminan por anteras biloculares erguidas ó inclinadas, ovales, oval-asaetadas ú oblongo- lineares, introrsas, abriéndose pour una grieta lonjitudinal y pega- das por el dorso ó por la base; de celdas opuestas, trabadas por la \ DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXIII. QUENOPODÍNEAS. 113 base, raras veces distintas ó apartadas á la vez por la base j por el ápice ; granitos polínicos globosos, ovales ó esféricos y rarísima vez sub-trííobos. Ovario tan pronto simple y algo escéntrico, como com- puesto y formado entonces de algunos carpelos distintos, mas ó menos conados ó reunidos y verticilados; otras veces es unilocular aunque compuesto, porque tiene una columna ovulífera; cada cel- dilla contiene un huevecillo único y cuando hay muchos están pe- gados en la columna central: el óvulo inserto por la base es canfi- lótropo y rara vez anfítropo ó anátropo; los estilos laterales salen del ángulo central ó interno de las cajitas, son distintos ordinaria- mente y rara vez están reunidos por la base, recorvados á manera de gancho y con los estigmas correspondientes situados en la cara interna. Fruto envuelto en la base del cáiiz que se ha quedado tal cual sin crecer, á veces estipitado y tan pronto formado de muchas cajitas, como de dos solamente, utricular, cocciforme, unciforme ó por fin samariforme. Testa de la semilla membranosa ó crustácea, las mas veces lustrosa y quebradiza, cuya endopleura es membra- nosa; endospermo farinoso, rarísima vez carnoso, tan pronto co- pioso ó escaso, central y situado entre los cotiledones, como nulo: embrión anular, rara vez homótropo, arqueado, periférico ó rarísi- mamente erguido. AndUsis dicotómica de ¡as stcb-órdenes y tribus. 1. Fruto siempre simple formado de un carpelo único ; cotiledones convolutos ó arrollados. — Sub.-órd. I. Petiverieas. — 2. Fruto compuesto ó raras veces simple, 3. 2. Un aquenio; endospermo nulo descaso; embrión recto ó en- corvado. T. I. Seguierieas. Petiveria alliacea, L. : C. T. Y.,/291. — Baya ó aquenio coriáceo endospermo copioso ; embrión anular. T. II. Rl VINE AS. 3. Fruto compuesto, que es una cápsula tan pronto unilocular con una columna central, como bi ó multilocular, cuyas cajitas es- tán pegadas en la columna ; cotiledones nunca convolutos. Sub- orden II. GmoMERiEAS. 4. — Fruto las mas veces compuesto y ra- rísimas veces simple, y formado de dos ó mayor número de cajitas distintas ó reunidas y sin columna central ninguna; cotiledones nunca convolutos; testa crustácea. Sub-órden III. Fitolacaceas. 6. 4. Flores hermafroditas; frutos uniculares; semillas pegadas en la columna central. T. L Estegnospermeas. — Flores dioicas siem- pre, 5. o. Frutos bi ó multi-loculares formados de cajitas pegadas al re- dedor de una columna central, y sin embargo libres entre sí y dehiscentes; testa de la semilla crustácea. T. II. Girostemoneas. — Frutos siempre multiloculares, cuyos carpelos están pegados al rededor de una columna central, un poco reunidos é indehiscentes entre sí; testa membranosa. T. III. Tersonieas. 6. Fruto monocarpio y que consiste en un aquenio papiráceo; se- milla de testa crustácea. T; I. Micti(~»teas. — Fruto bi ó policar- pio, 7. TOMO IT ' 8 114 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 7. Fruto dicarpio, rara vez poljcarpio, cujos carpelos son cocci- formes; semilla de testa membranosa. T. II. Limeas. — Fruto siempre poücarpio; carpelos abajados sin jugo ó utriculados; testa crustácea. T. III. Giesekieas. Petiverieas. T. II. RivjNEAS. Rhina , L. — 1. Estambres 4, alternos con las divisiones calicinales, de anteras ovales é introrsas; estilo con un estigma cabezudo, pedicelos provistos por la base de una bráctea decidua, 2. — Estambres 8-12, con anteras asaetadas yestrorsas: estigma sentado y apincelado: pedicelos provistos de una bráctea situada por encima de la base, 3. 2. Planta fruticosa de tallo derecho largo de 6 á 8', pero mas ve- ces solo de una vara, muj ramoso hacia la sumidad j cuvos ramos herbáceos llevan hojas ovales, pecioladas, aguzadas por el vértice, casi enteras. Flores pequeñas, blancas y teñidas de color de rosa, en espigas axilares ; lacinias del perigonio oblongas ú obo vales, ob- tusas, aplicadas á la base del fruto, que es una baja globosa, roja j lustrosa, piriforme j tan larga como el pedúnculo que la sostiene. U. Icsvis, L. — R. Jmmilis, L. — R. pvA'pVyVescens, Schrd. : C. T. V. %. 3. Arbustillo de unos 15 á 20' de altura, pero las mas veces mu- cho mas bajo, trepador ó sarmentoso, cuvos largos ramos llevan hojas elípticas ó elíptico-lanceoladas, por el vértice aguzadas, lam- piñas, algo festoneaditas. Flores en racimos flojos, ordinariamente mas largos que las hojas, mas grandes que las del precedente j blan- quecina^:, cuyas lacinias perigoniales, ovales y redondeaditas por fin son reflejas y venoso-riticuladas. Baja mas larga que su pedí- celo, de color negro teñido de purpúreo. R. octandra, L. — To^i- chostigma rivinoides, A. Rich., Cba. : C. T. V. 76. Ficotalacáceas. T. n. LiMEAS. Phytolacca, L. — 1. Tallo asur- cado ; estambres 8; carpelos 8 á 10: 2. — Tallo estriadito, estam- bres 10-20; carpelos 10-20: 3. 2. Mata herbácea cujo tallo saliendo de una raiz carnosa bastante gruesa se eleva á vara y media de alto, algo mas ó menos, ramosa superiormente, color moradusco así como los ramos y peciolos, de hojas elípticas ó elíptico-lanceoladas, puntiagudas, grandes y pe- cioladas; flores en racimos espiga,dos, erguidos, cuyos pedicelos son mas cortos que las flores, amarillento blanquecinas, bayas negras bastante gruesas, cuyos carpelos tienen el dorso convejco y proemi- nente. P. octaiulra, L. — P. decaiid/ra, Desc. : G. T. V., 489. 3. Yt'jetal sofruticoso de como dos varas de alto, de tallo ramoso por el véi'tice, con hojas ovales ú óvalo-lanceoladas, cortamente aguzadas, pecioladas, enteras y bastante grandes; flores rojizo- blanquecinas en racimos filiformes ó delgaditos, de ápice colgante ó inclinado, mas largos que las hojus; baya negra y los carpelos que la forman convexos por el dorso, son muy poco proeminentes, P. üosandray L. DICOTILEDÓNEOS. — ÜLASK XXlV. — AMARANTÍNEAS. 115 ORDEN II. — HIPÓ.IINOS. CLASE XXIY. — AMARANTÍNEAS. Familia hb.— AMARANTE AS 6 AMARANTÁCEAS,~n2.n- tas ordinariamente herbáceas y raras veces friiticosas, con hojas simples, enteras, mas ó menos pecioladas ó sentadas, alternas es- parcidas j algunas veces opuestas, ordinariamente sin estípulas y comunmente enteras; flores apétalas hermafroditas ó unisexuales y muy peíjueñas, dispuestas en espigas terminales, simples ó ramosas, á veces globosas ó axilares y en grupos ó espiguitas, las cuales constan de un periantio escarioso persistente, coroliforme y de co- lor, monófilo con 3 á 5 lacinias, cuya base está acompañada con fre- cuencia de escamas ó bracteitas escariosas: 5 estambres hipójinos tan pronto libres, distintos ó interruptos por otras tantas escaraitas ó estamínodes, como monadelfos y reunidos por la base que forma una especie de cilindro ó de tubo membranoso, cuyo vértice lobu- lado Ireva las anteras pegadas por su cara interior ; pistilo formado de un ovario único, simple, supero unilocular, monospermo ó polis- permo y de placentacion basilar, cuyo ápice lleva de uno hasta tres estilos, que se terminan en un estigma cabezudito y suelen faltar algunas veces ; el fruto, ordinariamente ceñido por el periantio, consiste en una cápsula unilocular mono ó polisperma que se re- vienta perpendicularmente desde el vértice, o se abre transversal- mente y es un pixidio; en fin á veces es indehiscente y monosper- mo; embrión escéntrico, cilindrico, oblongo, torcido al rededor del endospermo harinoso. Análisis dicotómica de lastriliis. 1. Anteras uniloculares, estambres monadelfos ; ovario unilocular monospermo; hojas opuestas. T. I. Gomfréxeas. Irisine celosioi-' des, L. : C. T. Y. 362. — Philnxeri'.s xermiculatus, R. Br. : C. T. \.3Q2. — AUernantheraachjraut/ia, R. Br. : C. T. Y.— 322. Anteras biloculares, 2. 2. Estambres reunidos por la base, ovario multiovulado. T. II. Celosieas. — Celosia arfjentea, L. : C. T. Y. 74. — Achyranthes áspera, L. : — Estambres distintos, de anteras ordinariamente biloculares; ovario uni-ovulado; hojas alternas. T. III. Aíiaranteas ó Aquieanteas. — Amhlogyne polygonoides, Raf. ü. I. EuxuLUS, Raf. — Yerba lampiña de talh) derecho, estriadito. ramoso, con hojas ovales ó romboideas, ordinariamente retusas, pecioladas; flores en racimos axihires sub-globosos, cuyas superiores forman espigas terminales, verduscas, con brácteas la mitad menos largas que el perigonio; utrículos ó frutos redondeados y ovales ala vez, de ápice un poco aguzado y riigoso. E. riridis, Moq. : C. T. Y., 629. — Yerba lampiña de tallo derecho, anguloso ó estriadito y 116 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. ramoso, con hojas largamente pecioladas, ovales, obtusas, aguzadas por ambos estremos; flores en espigas bastante largas, algo flexuosas j delgadas, verdes y formando panojas terminales, cuyas flores, bas- tante densas y cortamente pediculadas, están acompañadas de brác- teas tres veces mas cortas que el cáliz, utrículos ó frutos rugosos, casi globosos y de vértice agudito. B. catcdatus, Moq. — Ckenojpo- dium catidatu77i, Jacq. G. II. Amara>;tus, L. — 1. Flores monoicas; fruto reventándose transversalmente, pero incompletamente y por encima de la base, 2. — Fruto abriéndose transversalmente por en medio ; flores polígamas, 3. 2. Planta herbácea, lampiña, de tallo derecho muy ramoso que se eleva á 2 y 3' de altura y algunas veces mas, según el terreno en que se cria, con hojas romboidas ó romboido -lanceoladas, con dos espinas axilares largas de 4 á 5'", muy punzantes y escediendo el peciolo. A.spinosv.s, L. : C. T. V., 630. 3. Yerba glabra, de hojas romboidal-ovales, obtusas y comun- mente retusas ; flores en racimos apanojados, verduscas, cuyas es- piguitas superiores cilindricas son continuas y flexuosas, mientras que las inferiores están interrumpidas por la base ó reducidas á grupos axilares; 5 sépaíos oblongo-mucronados. pálidos, con una quilla verdusca, casi iguales, con las brácteas espinositas y con el fruto. A. tristis, L. — Yerba pubescente con hojas ovales ó romboi- do-oblongas; flúores en racimitos apanojados, apurpuraditos, rojas ó verduscas, cuyas espiguitas cilindricas están apretadas y estendi- das; 5 sépalos oblongo-mucronados, casi la mitad mas cortos que las brácteas espinositas; fruto saliendo un poco fuera del cáliz. J.. paniculatus, L. Familia 50. — NICT A JINB AS. —Víanlas herbáceas ó arbus- tos sarmentosos y algunas veces arbolitos, de hojas simples, enteras, opuestas ordinariamente, y raras veces alternas ; entre las yerbas algunas tienen la raiz gruesa, el tallo como nudoso y las hojas des- iguales en la misma pareja. Flores hermafroditas ordinariamente ó polígamas y hasta dioicas por causa de aborto, dispuestas en grupos axilares, en especies de racimos, panojas ó cimas, acompañadas por la base de una ó algunas bracteitas 6 sin ellas, contenidas ó no en un involucro mono ó polífloro que suele faltar algunas veces, y que constan de un perigonio coroliforme, ordinariamente simple, mas 6 menos grande, tubulado y cuya base persistente y volviéndose mu- cho mas dura envuelve al fruto y lo tiene encerrado: estambres 5 ó 1-3-4 ó 6-8 y hasta 10, cuyos filamentos libres, glandulosos ó esca- mosos por la base, se insertan al rededor del borde superior de un disco hipójino cupuliforme, anteras biloculares: pistilo único for- mado de un ovario simple unilocular y monospermo, de huevecillo solitario, basilar y erguido, cuyo ápice lleva un estilo sencillo y á veces torcido, terminado por un estigma cabezudo, algunas raras veces multífido; el fruto consiste en una especie de coriópside con- tenida en la base persistente del perigonio que la hace casi pare- cerse á un aquenio, algunas veces parece abayado por haberse vuelto canosa la basa perigonial; la semilla está formada de un endospermo central harionso ycopioso, al rededor del cual está rollada la rai- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXIV. — AMARANTÍNEAS. 11*7 cilla que mira por abajo hacia el punto por donde está pegada la se- milla; en lugar de ¡ser arqueado el embrión, es á veces derecho ó conduplicado. Análisis dicotómica de las trih(,s, 1. Involucro nulo; una ó tres bracteitas, tan pronto deciduas como persistentes, acompañan á las flores, las cuales son hermafro- ditas ó polígamas, j algunas veces dioicas por aborto; embrión con- duplicado, derecho ó convoluto. T. I. Boerhaavieas. — Pisonia siibc(yrdata, Sw. — Siempre un involucro, 2. 2. Involucro caliciforme, mono ó polifilo ; estambres 5; embrión encorvado: yerbas de raiz mas ó menos carnosa y gruesa; tallos herbáceos como nudosos j crecidos en los lugares correspondientes j como articulados. T. II. Mirabíleas. — Mirahilis jalappa, L., j sus variedades. — M. dichotoma, Desc. : C. T. Y., 531. — Involucro bractei forme, cuyas brácteas mayores y dilatadas están con frecuencia pintadas y simulan una corola; estambres 8; vejeta- Íes sarmentosos y trepadores. T. III. Bougainvilieas. Boerhaavieas. — BoerJiaania, L. — 1. Vejetales sofruticosos, trepadores ó enredaderos, 2. — Plantas herbáceas, nunca de tallo trepador, 3. 2. Tallos desparramados, muy ramosos, no muy largos, lampiños con hojas lisas, glabras, cortamente pecioladas, acorazonado-redon- deaditas ó aguzaditas, á veces algo repandas, de cara inferior con algunos tuberculitos; flores amarillento-blancuzcas , dispuestas en umbelas terminales de á 6 ó á 7, cuyo pedúnculo común es algo mas largo que las hojas; tubo calicinal elipsoídeo y por fin en forma de maceta, sub-trunco y glanduloso por el vértice, de color oscuro y tan largo como el limbo estendido. B. scandens, L.: C. T. V., 782. 3. Lampiñas: flores rojas ó rojizas, 5. — Pubescentes; flores co- lor de sangre, 4. 4. Yerba de tallo ascendente, ramoso, que se eleva á l\li2 de alto, con hojas ovales, de vértice redondeado, sub-sinuosas y undu- losas, pecioladas, concolores ó de cara inferior mas blanquecina; flores dispuestas en panojas cortas, desparramadas y flojas ó en co- rimbitos axilares, pediceladas ; tubo perigonial por fin con figura de maceta y cilindrico á la par, redondeado por el vértice, con es- trias densamente glandulosas. B. lúrsuta, W. — B. carihoea, Jacq.: C. T. Y. 292. 5. Flores de color rojo pálido y aveces casi blancas, un poco te- ñidas de rojo, vértice del tubo calicinal obtusamente mucronado, 6. — Flores rojas siempre, vértice del tubo perigonial nunca mucro- nado, pero redondeado y entero, 7. 6. Yerba cuyo tallo, alto de 2 á 3', es muy ramoso por el vértice, derecho, algunas veces alampiñado, con hojas ovales ú oval-lan- ceoladas, de vértice aguzadito y puntiagudas, cortamente peciola- das, undulosas por los bordes, de cara inferior mao blanquecina que la superior. Flores en panojas bastante grandes, flojas, erguidas y de pedicelos muy largos; tubo calicinal por fin aclavado, 5 angu- 118 DIVISIÓN tsKGUKDA. FAIS EROGAMOS. loso y trunco, con es+rias proeminentes fcin glándulas; 2-3 estam- bres. B. erecta, L. : C. T. V. 292. 7. Tallo de hase estendida por el suelo, desparramado y cuyo vértice muy ramoso es ascendente y como de T li2 ó algo mas de alto, de hojas ovales redonditas por el vértice, algo pestañosas por la márjen y bastante dobles, un poco ásperas y de cara inferior mas blanquecina. Flores en ])anojas flojas, elongadas 3^ abiertas ó esten- didas, con pedúnculos filiformes trifloros; tubo perigonial por últi- mo con figura de maceta, 5 anguloso, con estrias finas y glandulo- ssas. B.fdnwidala, Rich. — B. diffma, Sw. : C. T. V. 2'J2. SÜB-DIYISION 2. — GAMOPÉTALOS Ó EUMONOPETALOS. SECCIÓN I. — PERLÍINOS. CLASE XXV. — CAMPAXULÍNEAS. Farnilia 57. — LOBELIÁCEAS. — Plantas ordinariamente herbáceas anuales, bisanuales ó vivaces, comunmente con savia le- chosa, ó algunas veces arbustos ó frútices trepadores, de hojas sim- ples mas ó menos sentadas y á veces escurridas ó decurrentes, rara- mente enteras, pero sí dentadas, festoneadas ó algo lobuladas y alternas. Flores siempre hermafroditas, de prefloracion valvar, so- litarias «y axilares, ó en espigas ó panojas flojas y terminales, las cuales constan de un cáliz monosépalo, semi-adherente y con 5 dien- tes ó lacinias tiesecitas mas ó menos larguitas; corola monopétala bi ó monolabiada, labios desiguales, cuyo superior es bi-partido, mientras el inferior mayor es trilobado, marce-^cente ; estambres 5, insertos en el cáliz con anteras bi-loculares, soldadas entre sí y formando así un tubo por donde pasa el estilo 3^ terminado por el estigma, y de los cuales algunos tienen el ápice barbudo. Pistilo compuesto de un ovario semi-ínfero, bi ó 3 locular polispermo ó á veces 5 locular, cuyo vértice, prolongado á manera de pico, se ter- mina en un estilo simple largo y filiforme que lleva un estigma bi- labiado y bastantes veces velludo, cuyos huevecillos están pegados en placentas gruesas. El fruto es una cápsula con dos ó tres celdas, y se abre por el vértice á favor de algunas ventallas que se quedan soldadas por sus lados, otras veces por medio de poros cuyo número corresponde con el de las celdillas, por donde salen semilbis pequeñi- tas de endospermo carnudo ; algunas raras veces abayado é indehis- cente. Análisis dicotómica de las tribus. 1. Fruto indehiscente seco ó abayado ; en algunos géneros el tubo de la corola está hendido hasta la base, y en los demás la base se queda cerrada. Tallos comunmente leñosos; pedúnculos frecuente- mente axilares y multífloros. Inflorescencia thirsoídea ó anómala. T. I. Delisseareas. CentropogonSurinamensis, Prl. — Fruto siem- pre capsular, 2. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVI. — ASTEROÍDEAS. 119 2. Cápsula unilocular, 3. — Cápsula bilocular ; con dos ventallas medio septíferas y abriéndose por el ápice ó mas rara vez por medio de dos poros. Plantas herbáceas. — T.II. Lobelieas. — Isotomalon- giflora.Vñ. : C. T. V. , 399. — Tupa assurgens. A. D. C. : C T. V. 400. 3. Cápsula unilocular prismática y elongada, con tres ventallas lateralmente dehiscentes, cuyas dos son medio placentariadas. — T. III. Clintonikas. — Sub-bilocular de tatique incomjpleto j abrién- dose á favor de un opérculo ó tapa convexo situado en el ápice. T. IV. LlSOPOMEAS. Familiah'^. — GOODENOVIACBAS. — Vejetales fructicosos ó plantas herbáceas no lechosas, con pelo ó lampiños, cu vas hojas simples, mas ó menos espesas, de forma y tamaño muy varios, son esparcidas, dentadas y algunas veces incisas, sin estípulas. Flores distintas axilares formadas de un cáliz monosépalo cuyo tubo está mas ó menos pegado ó adnado con el ovario, de limbo con 3 ó con 5 lóbulos, á veces entero y vagamente persistente; corola monopétala mas ó menos regular, de tubo hendido lonjitudinalmente por la cara superior 3' raras veces 5 partible, con el limbo 5 partido con dos la- bios y raras veces con uno solo, inserta en un disco llano y lanceo- lado, de lóbulos laterales ; estambres 5 concretos con la corola con cuyos lóbulos alternan, de filamentos distintos, cuyas anteras con- cretas ó mas veces libres, verticalmente pegadas por la base y bilo- culares, son lonjitudinalmente dehiscentes. Polen simple ó com- puesto. Ovario bilocular y raras veces 1 ó 4 Iccular, cuyo ápice lleva un estilo simple y rarí^imamente doble, terminado por un estigma carnudo, entero ó bílobo con la boca pestañosa y raras veces des- nuda, provi::to de un endusio submembranoso o ciatiforme. Fruto tan pronto polispermo y capsular con los tabiques paralelos á las ventallas, ó mas rara vez contrarios á ellas, como drupáceo ó nuci- forme; semillas indefinidas las mas veces provistas de un endosper- mo carnudo, de embrión erguido con los cotiledones ordinariamente foliáceos y de plumula apenas notable. Tribu 1^ EsCEVOLEAS. — Semillas en número definido; ordina- riamente una ó dos en cada celdilla; el fruto consiste en una especie de drupa ó de nuez adherente con el cáhz cuyo limbo ordinaria- mente la corona. — Scm'ola Plumicri, L.: C. T. V. 401. — Tribu 2^ GooDENiEAS. — Semillas en número indefinido en la celdilla de la capsula. SEGínON II. — EPIGINOS. ORDEN lo. — SINAXTÉEEAS. CLASE XXVI. — ASTEROÍDEAS. Familia 59. — COMPUESTAS ó SYNANTÉREAS. — Plan- tas lieibáceas anuales ó bisanuales, matas, frútices y arbustos algu- nas veces, de hojas compuestas, algunas veces simples, enteras, dentadas, lobadas, laciniadas, sinuadas ó roncinadas, ordinaria- 120 DIVISIÓN SEGUÍS DA. FANERÓGAMOS. mente alternas j alguna.s raras veces opuestas, sentadas ó peciola- das, lampiñas ó velludas, lisas ó ásperas. Flores pequeñas agrupadas en número muj variado en el vértice de un pedúnculo mas ó menos crecido y desarrollado j formando así calátides ócabecitas cercadas por un involucro formado de una ó de algunas series de hojuelas, cuya forma, tamaño y consistencia varian muchísimo y presentan por esa disposición particular el aspecto de una ñor única cuyo in- volucro hace el papel de cáliz, de tal suerte que otras veces se lla- maba cáliz común. Estas florecitas son de dos clases ; las unas regu- lares, de corola infundibuli forme y tubulosa con el limbo 5 dentado ó 5 lobado, las otras irregulares cuyo limbo hendido en toda su lon- jitud se prolonga por afuera conforma de una lengüitamas ó menos larga terminada por 5 dientes. Esas flores se llaman semiflósculos ó lígulas y las primeras flósculos ; tales flores son ya hermafroditas, ya solamente masculinas ó femeninas y otras veces neutras, y pue- den presentarse las unas y las otras en la misma cabecita ó calátide, ó en calátides diferentes que están dispuestas en espigas, en racimos ó en panojas terminales mas ó menos fornidas, algunas, veces solita- rias y axilares. El ápice del pedúnculo crecido que lleva las flores se llama receptáculo, foranto ó clinanto, es llano ó cóncavo, otras veces convexo ó cónico: las flores salen de su superficie lisa ó están mas ó menos anidadas en su sustancia, y formando así areolas mas ó menos profundas en la superficie, cuyos bordes al levantarse en derredoi de la base de cada ovario ó de cada aquenio se vuelven es- camitas enteras ó laciniadas, membranas irregulares ó regulares, cerdas ó p3los. Ese conjunto de flores mas ó menos grueso está cer- cado y ceñido por un involucro formado de hojuelas ó de brácteas de forma, tamaño y consistencia muy variados, frecuentemente redu- cidas á escamas, algunas veces terminadas por una púa y dispuestas circularmente en una serie ó en dos y entonces forman así como dos arcos concéntricos. En ese caso son poco numerosas y algunas veces las esteriores, mas pequeñas, no parecen las de la serie interior; en el caso de ser numerosas, lo que sucede ordinariamente, son em- pizarradas y dispuestas en espiral; comunmente libres y algunas veces soldadas entre sí por la base; cada florecita puede estar acompañada de una bracteita propia, que sale con ella del receptá- culo y que se presenta con el aspecto de una escama blancuzca ó de una membranita, que se llaman pajitas ó bracteitas , cuando faltan, lo que suele suceder con bastante frecuencia, el receptáculo se dice desnudo, cuando el involucro contiene flores hermafroditas solamen- te, la calátide se dice homógama, y se llama al contrario heteró- gama si hay juntas flores hermafroditas y unisexuales; en este último caso las flores neutras ó femeninas se hallan por la circunfe- rencia, mientras que las hermafroditas ó las masculinas ocupan el centro ; cuando las cabezas están formadas las unas de flores mascu- linas solamente y las otras de femeninas, pero hallándose sobre la misma planta, se dicen heterocéfalas y monoicas cuando contienen á la vez flores femeninas y masculinas; las calátides pueden tener á la vez flores flosculosas ó discoideas, o flores semi-flosculosas ó ligu- ladas ó ambas á la vez. y las calátides se llaman radiadas; las flores DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVI. — ASTEROÍDEAS. 121 pueden ser todas bilabiadas j las cabezas se dicen falso-discoideas; otras veces las de la circunferencia son lig-uladas y las del centro labiadas, las calátides son entonces radiatiformes ó falso-radiadas ; algunas veces en las cabezas flosculosas ó falso-discoideas las flores esteriores conservan la forma de las interiores, pero se vuelven mu- cho mayores, y las calátides se llaman entonces coronadas. Tales flores son form.adas de un cáliz adherente con el ovario, de tal ma- nera que no tiene limbo alguno; otras veces se dilata un poco por encima del ovario, en donde forma una coronita; con mayor fre- cuencia se presenta con forma de algunas divisiones, raras veces foliáceas, pero frecuentemente con la de pajitas ó de escamitas: mas generalmente constituyen un penaclio ó pa})po del ovario y saliendo del ápice sentado ó estipado; se dice el penacho plumoso cuando los radios que le forman llevan pelo visible, simple ó peliforme cuando glabro parece un pelo largo y liso ; cubierto de dientecitos, se llama denticulado. La corola es regular, infundibiliforme, tubulosa y 5 dentada en los flósculos, unilabiada y un poco tubular en los semi- flósculos, y otras veces bilabiada, con uno de los labios vuelto hacia el centro y es entero ó partido, mientras el otro que mira hacia afuera es con 3 ó 4 divisiones : tales corolas tienen 5 nervaduras principales que alternan con los lóbulos, de prefloracion valvar. Es- tambres 5 llevados por el tubo corolar, tienen los filamentos libres ó soldados entre sí ; pero las anteras son siempre soldadas entre sí por los bordes y forman así un tubo, de tal manera que el vértice, ordinariamente prolongado en un apéndice mas ó menos largo, es solo distinto ; algunas veces su base se dilata y se alarga en una co- lita que suele faltar otras veces. Pistilo formado de un ovario uni- locular con un huevecillo único y erguido, infero terminado por un estilo largo, filiforme simple en las flores masculinas, pero siempre en las femeninas y en las hermafroditas partido en dos brazos termi- nales, de las que una parte de su superficie está cubierta de pelos colectores y con los bordes de la cara interna provistos de dos fajitas glandulosas tenidas por los estigmas lejítimos, aunque se llame es- tigmas ordinariamente á los brazos que las llevan ; la forma, tamaño y disposición de los brazos son muy variados; el fruto es un aquenio coronado por el penacho ó sin él: embrión hemítropo sin endosper- nio ninguno y de raicilla corta y vuelta hasta el punto por donde se pega la semilla. Análisis dicotómica de las tribus y suh-trihis. 1. Calátides homógamas y flores todas liguladas; plantas herbá- ceas lechosas y de hojas alternas simples, mas ó menos roncinadas. Estilo cubierto de pelo esteriormente y cuyos brazos largos y vuel- tos por afuera son enrollados y con la cara superior llana. — T. I. LiGULiFLORES. — Calátidcs heterógamas, 2. 2. Corolas tubulares ó á veces liguladas, solamente las de la cir- cunferencia ó periferie están en ese último caso. — T. II. Tübuli- FLOREs ó CoRiMBÍFERAS, 3. — Bilabiadas ó las de las circunferen- 122 DIVISIÓN SECUNDA. FANEliÓGAMUS. eias liguladas: estilo eon figura de basion y de vértice un poco en maceta, con los lirazos muy cortos y obtusos, esteriormente pelie- rizados ó quizá mejor sin brazos, pero cuyo Amortice simula una boca con los dos labios ovales derechos, obtusos y peludos por los bordes. — T. III.Labiatiflores. — Leria nntans. De: C. T. V., 687. 3. Un crecido ó especie de nudo situado inmediatamente por de- bajo del punto en donde principian los brazos, cubierto ordinaria- mente de pelo; fajitas estigmáticas tan largas como los brazos cor- tos, derechos y frecuentemente formando como una boca y confluyen por el vértice de ellos. — S.-T. I. Caeduáceas. — Kingun crecido ó nudo por debajo del oríjen de los brazos del estilo, 4. 4. Brazos lineares siguiendo iguales hasta el vértice provisto de pelos, llanos esteriormente y con pelo muy fino, fajas estigmáticas llegando solamente ha&ta la parte velluda del vértice; penacho pe- ludo; hojas alternas. — S.-T. II. Asteroídeas. G. II. — Brazos del estilo nunca lineares é iguales ala vez, ni llanos, ni peludos tampoco esteriormente, 5. 5. Estilo perfectamente cilindrico, de brazos troncos por el vé tice, coronado con pelos dispuestos á manera de pincel, pero qu^ después va prolongándose en cono ó en apéndice. — S.-T. III. Se- NECiÓEAS, 7. — Vértice de los brazos nunca prolongado en cono ó en apéndice tampoco, 6. 6. Brazos largos, cubiertos de pelo por afuera y de vértice dila- tado á manera de maceta ; fajas estigmáticas llegando apenas al me- dio de la lonjitud del brazo, punto en donde principian á ser peludos esteriormente; cabezas homógamas y discoideas; hojas ordinaria- mente opuestas. — S.-T. lY. Eupatoeíeas. G. líI.-lY.-V. — Bra- zos alargados y subulados, ó cortos y obtusos, delgados y cilindricos, pelierizaditos esteriormente, cuyo pelo es largo é io^ual; fajas esti- gmáticas marjinales que no alcanzan al medio de su lonjitud; cabezas discoideas y homógamas; hojas ordinariamente alternas. — S.-T. V. Yeenoníeas. — Vernonia arhorescens, Say. — Fleplian- topus scaher, L.: C. T. Y., 84. 7. Flores unisexuales, de penacho no peludo; hojas ordinaria- mente opuestas. S.-T. Yl. Melanpodíneas. — Clibadium Radieri, Gr. — C . terehinthaceum. De. G. Yl. — Yenenoso para las reses y sus ramas sirven para pescar embaí bascado. — Parthenium histero- phuriis, L. : C. T. Y., 148. — Amdrosia artemidfolia, L.. C. T. Y. 831. — Flores nunca unisexuales, 8. 8. Cabezas siempre discoideas; anteras de base provista de una colita ó apéndice ; estilo de brazos truncos y con pelo apincelado; hojas alternas, enteras ordinariamente, muy peludas }' blancas. S.- T. Yll. Gn'afalíeas. — GnajJ^ialmm Domingense, Lam. : C. T. Y., 403. — Cabezas algunas veces solamente discoideas, radiadas ó no, 9. 9. Flores del disco siempre hermafroditas, 10. — Flores del disco ordinariamente pero no siempre hermafroditas; aquenio desnudo ó coronado; hojas 3.\teTnsi!>. Astemíde as. JS'gletes Domingensis, Cass. 10. Cabezas discoideas homógamas ó heterógamas, algunas veces radiadas; anteras sin apéndice por la l)ase ; unos géneros tienen el vértice de los brazos provisto de un apéndice cónico corto; ginoxys, DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXVI. — AfcTEROÍDEAS. 123 por ejemplo, y algunas especies del género senecio ; penacho no pe- ludo : hojas ordinal iamente alternas. S.-T. VIÍI. SenecicídeaS. — Neurolaena lohcita, 13. Br.C. T. V., 151-25'7,— Senecio discdor.'DQ.: 11. Receptáculo desnudo y achatado ó llano: hojas con glándulas transparentes hastante grandes y numerosas. S.-T. IX. Tagetí- NEAS. — Poroj'.hylhim ruderale, R. Br.: C. T. Y., 296. — Receptá- culo paleáceo nunca llano. 12. 12. Cónico; cabezas discoideas ó radiadas cuyos radios son ordi- nariamente femeninos; penacho formado de escamas di&íintas; ho- jas ordinal lamente alternas, pero opuestas en las de las Antillas. S.-T. X. Hele>íeas. — Caleo. Jamaicensis,'L.'. C.T. V. 152. — Re- ceptáculo de formas variadas, las mas veces convexo, con bastante frecuencia cónico, algunas vecesllanitoy otras vecesmuy pequeñoy cilindrico ; aquenio coronado, cerdoso ó desnudo; hojas oidinaria- mente opuestas ; cabezas discoídeo-homógamas ó heterógamasy ra- diadas. S.-T. XI. Heliáxteas. — Eciipta alba, Hattsk : C. T. V., 131. — Borrichia arhorescens, De: C. T. V.,259. — Bidens letican- tlius,'^ .', C.T.V.,321Í. Chysanthelliim prociimle7is, Rich.: C. T. V., 328. G. I. Spilanthes, Jacq. 1. Yerba vivaz alampiñada de tallos es- tendidos y echando raices, mientras los ramos son ascendentes y llevan hojas lanceoladas ó lineares, enteras, aguzadas por la base sub-sen- tada; cabezas blancas de 4'" de diámetro, solitarias, sub-globo-as y por íiltimo obtuso-cónicas y discoideas; receptáculo cónico cilindrico; escamas del involucro en número de 6 á7y dispuestas en dos series; aquenio con dos aristas desiguales de las que la mas larga es pelitie- sita y pestañosa. /S'. nrens, Jacq.: C. T. Y., 458. — Yerbas anuales, 2. 2. Desparramada, alampiñada, muy ramosa y cuyos ramos esten- didos por el suelo llevan hojas óvalo-lanceoladas, lanceoladas ú ovales, festoneadito-ondeadas, triplinervias, de base angostada ó aguzada hasta el peciolo ; cabezas ovoideas y por fin cónicas, con los radios blar eos ; receptáculo cilindrico; involucro de 5 6 esca- mas, encerrando casi las lígulas; aquenio desnudo ó con dos cerdas diminutas, pestaño:-o, negro y con la márjen blanca. >S'. uliginosa, Sw. — S. teue'Iay deMlis, Kih. — S.tSalzmanni, J)c.C. T. V. 458. — Detallo en varita, áspero, pubescentito óalrmpiñadOjConhojasovales ó lanceoladas, festoneadas ú ondeadas, triplinervias, angostadas y de base aguzándose en peciolo; cabezas cónicas, discoideas y raramente radiadas; receptáculo cilindrico; involucro de 5 encamas; aquenio con dos arittas, pestañoso y largo de 1'". /V. eccasperaici, Jacq. (t. IÍ. Pj.uchea, Cass. — Arbustillo ramoto que se eleva á 4 ó 6' de altura, cuyos ramos herrumbroso-tomentosos llevan ho- jas oblongas ó eliptico-oblongas, puntiagudas, bien entei'as ódenta- ditas, ondeadas, de cara superior glanduloso-pubet^centita, mientras la inferior es blanca, pubescente ó tomentosa; cabezas pediceladas, hemisféricas como de 4'" de diámetro y dispuestas en corimbos ama- nojados tomentosos, cuyas escamas del involucro ovales ú oval- oblongas son obtusas y tomentosas, mientras las de la serie interior son oblongo-lineares, aguzadas y escai'iosas. P. cdorata, Cass. : C. T. Y., 149. — Mata sofrnticosa. de tallo derecho, ramoso superior- 124 DIVISIÓN' .SEGUNDA. FANERÓGAMOá. mente y que se eleva á 3 ó 4' de altura, cuyos ramos pubescentes ó alanipiñados llevan hojas oblongo-lanceoladas ó lanceoladas, des- igualmente aserradas, ondeadas, algo pubeseentitas, sub-tomento- sas ó alampiñadas y pecioladas ; cabezas purpúreas de 2 á 3'" de diámetro, pediceladas y sub-globosas, formando corimbos termina- les sub-amanojodaSjde escamas herrumbroso-pubescentes y abiertas ó estendidas, cuyas esteriores ovales y obtusitas se vuelven gra- dualmente oval-lanceoladas y puntiagudas para formar la serie in- terior. P. 2nrr2mresccns, De: C. T. Y., 150-256. G. III. — EuPATORiuM. L. 1. Receptáculo cilindrico corto y prolongado entre las escamas del involucro; convexo ó achatado porencima de ellas: involucro formado de escamas apretadas, alampiñadas y dispuestas en algunas series, 2. — Receptáculo de- primido y ordinariamente diminuto; involucro abierto formado de 1 á 3 series de escamas cuyas esteriores son frecuentemente mas cortas, las de la serie principal estando sub-iguales, 3. 2. Arbustito velludo que se eleva como á unos 6' de altura, con ramos cilindricos, tiesos, estendidos y que llevan hojas opuestas, pe- cioladas , ovales ú óvalo-lanceoladas, aguzadas, frecuentemente acuñadas por la base, triplinervias, velludo-pubescentcte y con glán- dulas diminutas esparcidas por la cara inferior, gruesamente aser- radas, con algunos dientes por encima de la base sub-entera, largas de 3", sobre V lj4 de ancho; cabezas con 20 á25 flores azul-pálidas ó blanquecinas y olorosas, pediceladas y dispuestas en corimbos tricó- tomos y densos ; receptáculo llano; involucro largo de 4'", con escamas estriadas, cuyas interiores oblongo-lanceoladas son aguzadas, mien- tras las esteriores aovado-oblongas son obtusas; aquenio áspero por los ángulos. E. odoratum, L. — E . brac/¿iatu7n,\\'i^k>iz.C. T. V. 152. 3. Arbuítillo que se eleva á como unos 4' á 6' de altura, cuyos ra- mos cilindricos y aterciopelado-herrumbrosos llevan hojas opuestas, pecioladas, deltoídeas, obtusas ú obtusitas, sinuosas, oscura- mente aserradas ó sub-enteras. 3 nervias, de cara superior pubes- centita, mientras la inferior es aterciopelado-herrumbrosa y glan- dulosa, ordinariamente largas de 1 1\2 á 3", sobre 1 á 2" de ancho y cuyo peciolo tiene solamente 3 ó 4"' de largo. Corimbos amanojado- redonditos formados de cabezas pediculadas y con 8 á 15 ñores; re- ceptáculo diminuto, de involucro cuyas escamas lanceoladas, obtu- sas, estriadas, son herrumbroso-pubescentes y mas veces sub-iguales; corola gradualmente cónica como de V" de largo; aquenio linear algo áspero y tan largo como la corola y el involucro. E. villosum, Sw. — Mata de tallo sufruticoso ó casi leñoso, delgado, largo como de r 1|2, ramosísimo y estendido en el suelo, cuya sumidad herbá- cea es ascendente y carga con hojas casi sentadas, opuestas, lanceo- ladas, 3 nervias, aguzadas, enteras y lampiñas, frecuentemente moraduscas, así como los ramos. Flores en corimbo flojo; oligocé- falo, cabezas pediceladas formadas de 1-2 flores; involucro con una serie ó algo mas de escamas lineares, acuminadas, desiguales y pu- bescentes por el dorso, E. ay apaña, C. T. Y. T19. G. lY. Critonia, P. Br. — 1 . Arbusto ramoso superiormente , de- recho y que se eleva á 8 ó 10' de altura, lampiño, muy oloroso, y con DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVI. — ASTEROIDEAS. l'2o hojas lanceoladas ó elíptico-lanceoladas, aguzadas por amhos estre- ñios, aserradas y cuyos dientes pequeños son frecuentemente distan- tes los unos de los otros, un poco lustrosas y largas de 4 ó 6", sobre 2 á 3" de ancho, cuyo peciolo tiene 4 á 5'" de largo; panojas algo amanojadas y formadas de cabezas en grupos de á 3 ó de á 5, senta- das ó subsesiles y con 3-4-5 flores; de involucro largo de 3 á 4'", con escamas dispuestas en 3 ó en 4 series, estriadas, obtusas, cuyas interiores son oblongas, las del medio gradualmente mas cortas y ovales, mientras que las estcriores son muy cortitas; aquenio peli- erizadito. C. daleci, De. : C. T. V. 258. — Arbusto alto de 10 á 16", no aromático, con ramos y peciolos pubescentes, de hojas ovales, elíp- ticas ó cuyas superiores son elíptico-lanceoladas, puntiagudas, aser- radas y con los dientes aproximados y frecuentemente mucronados, no lustrosas, largas de 8", sobre 4" de ancho; las superiores de 3 á 4", sobre 1 á 2", con el peciolo de 4 á 12'''; panojas grandes pira- midales, formadas de cabezas sentadas agrupadas por á 3 ó á 7, for- madas de 2-3-4 flores, cuyo involucro, largo de 2'", es formado de escamas sub-estriadas, obtusas y dispuestas en 3 ó 4 series, con las interiores oblons'as y las del medio bruscamente acortadas y ovales, mientras las esteriores son muy cortitas; aquenio algo pelierizado ó alampiñadito. C. parvifiora, De. — Euy. parvijlora, Sw. G. V. MiKANiA. \y. — Cabezas dispuestas en espigas oblongadas y compuestas óen racimos, 2. — Cabezas terminales sostenidas por ramitas acorimbadas , pediceladas ó con las del centro solamente sentadas, cuyo involucro está con brácteas situadas por la base ó sin ellas, 3. 2. Mata abejucada, de tallos largos, ramosos, delgados, cilindri- cos, pubescentes ó alampiñados, con hojas membranosas, alabardado- deltoídeas, cortamente aguzadas, dentado-ondeadas ó sub-enteras, 3 nervias, anchas de 3"; cabezas subsesiles dispuestas en espigas compuestas y delgadas, con brácteas mucho mas largas que el pedí- celo rudimatario; de involucro largo de V" 1|2 y formado de esca- mas oblongas y obtusas; flores blancas olorosas, de corola, con el limbo 5 ñdo; aquenio espeso y pubescentito. J/. Jiastata, W. — Fvp. liastaUím, L. 3. Mata abejucada como voluble ó mejor enredadera, detallo largo muy ramoso, bastante delgado, anguloso y pubescente, con hojas deltoídeas, anchamente acorazonadas ó subcordadas por la base. 5 nervias, irregularmente dentadas ó su1)-enteras, de cara inferior pubescente ó alanipiña-da, cuyas inferiores son tan largas como el peciolo y tienen 2 ó 4" de ancho, mientras las superiores son fre- cuentemente aovadas; cabezas en corimbos apanojados, cuyos par- ciales son contraidos; pedúnculos velludo -pubescentes; pedicelos temados mucho mas cortos que las cabezas; bracteitas lanceoladas, ó elíptico-lanceoladas, aguzadas y mitad tan largas como el involu- cro, que tiene 3'" de largo y cuyas escamas oblongas, sub-estriadas, obtusitas ó puntiagudas son pubescentes; limbo do laceróla 5 fido, campanulado y tan largo como el tul)o; aquenio lampiño con pena- cho color herrumbroso pálido. M. gonodada, De. — M. guaco, Desc. : C. T. V., 717. Mata enredadera de tallos largos, alampiñndn. 126 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEHÓGAMOS. cuyos ramos estriado-cilíndricos algo angulares por su parte superior llevan hojas membranosas, acorazonadas, profundamente sinuadas, puntiagudas ó aguzadas, 5 nervias, dentadas ó subcimoso ondeadas, alampiñadas; corimbos parciales comunmente umbelados, con pe- dúnculos angulares, a^go alados por la base, alampiñados, cuyos pe- dicelos en grupos de 3 ó de 5, son ordinariamente mas cortos ó mu- cho mas cortos que las cabezas ; bracteitas lanceoladas como una mitad menos largas que el involucro, cuyas escamas oblongas ó oblongo-elípticas, obtusas ó mucror.adas, son alampiñadas y estria- das; limbo de la corola campanulado, casi tan largo como el tubo, con 5 dientes deltoídeos; aquenio glanduloso.il/. Orinoceiisis, Kth. — M. iimlellifera, Gard. — M. süheriana, De. — M, suateolens, Kth. : C. T. V. 718. LiGULiFLORES. — Lüctuca, L. — Hojas mas ó menos cóncavas, mas ó menos estrechas por la base, bastante grandes, undulosas ó rizadas por los bordes, ó no rizadas, enteras ó sinuadas, con la cos- tilla en forma de quilla lisa y lampiña ó algo alampiñada; tallo con algunas hojas acorazonado-entejérrimas; tallo apanojado superior- mente. L. sativa, L. : C. T. V., 560. — Tallo derecho, hojas lan- ceolado-cnsiformes, amplcxicaulas y dentadas; flores en racimo ter- minal compuesto. L. Canadensis, L. — Srmchus ¡^allidus, Wild. - Malgedimn integrifrjUmn , Cass. — Lactuca Can,adensis, altísima angustifolia flor pálido-suifurea, Tuss. : C. T. Y. 581. ORDEN II. ESTAMBRES LIBRES. CLASE XXVII. — LONIOEROÍDEAS. Familia, 60.— VALERAINÁCEAS ó VALERIANEAS.^ Plantas herbáceas, anuales, bisanuales ó vivaces, frecuentemente provistas de un rizoma; hojas simples enteras, lobadas ó partidas de tal suerte que á veces parecen compuestas, pero son solamente pina- tífidas, opuestas, mas ó menos pecioladas. Flores pequeñas siempre bermafroditas, dispuestas en corimbos ó cimas terminales y en pano- jas algunas veces, acompañadas á veces de hojas florales que simu- lan un involucro y constan de un cáliz monosépalo j adherente con el osario, cuyo limbo dentado tiene con frecuencia sus divisiones rolladas hacia dentro, acrescentes y volviéndose un penacho plumoso ó membranoso; corola monopétala de limbo con 5 IrJbulos, mas ve- ces desiguales, y alguna vez provista de un espoloncito, de preflora- cion valvar; estambres 5 ó 3 períjinos pegados al interior del tubo de la corola y alternando con sus lóbulos. Pistilo único formado de un ovario infero 1 ó 3 locular mo.nospermo, cuyo vórtice lleva un estilo simple terminado por 1 ó por 3 estigmas; el fruto es una cáp- sula indehiscente ó un aquenio con 1 hasta 3 celdas monospermas,^ de las cuales, dos ordinariamente suelen abortar; coronado por un penacho ó vilano plumoso ó membranoso; embrión sin endospermo. Gr. Valeriana, L. — 1. Hojas todas enteras ó un poco partidas, 2. DICOTILEDÓNEOS.— CLASE XXVII. COFFÍNEAS. 127 — Hojas inferiores ó radicales enteras, mientras las caulinares son siempre tripartidas ó pinatílol)as, 3. 2. Yerba de tallo derecho, simple y estriado que se eleva á 1' 1[2 ó 2' de altura, muy poco ramoso y con hojas angostamente lanceo- ladas, aguzadas por la base, dentad! tas y pestañosas; flores agrupa- das en verticilos que forman por su reunión espigas oblongadas y algo interrumpidas. V. coarctata, C. T. V., 297. 3. Yerba velluda de tallos ramosos, estriados ó asurcados, cuyas hojas radicales son enteras, acorazonadas ó acorazonado-íettoneadas y aguzadas, mientras las caulinares son pinatisectas, con 3 ó 5 divi- siones ovales, dentaditas, aguzadas, con una impar grande; la base del peciolo es color rosado. Flores en espigas desparramadas ; corola de base gibosa, estambres tan largos como ella; penacho formado de 10 radios ó divisiones. V. panicidata, C. T. Y., 297. Fa?nilia 61. — CAPRIFOLIA CEAS. — Arbolitos ó arbustos de hojas simples ó compuestas é imparipinadas, cuyas hojuelas son des- iguales y ordinariamente dentaditas ó enteras, opuestas, pecioladas y sin estípulas. Flores hermafroditas dispuestas en corimbos, cimas ó racimos terminales, que constan de un cáliz monosépalo adlierente, de limbo 5 partido y cuya base está acompañada de brácteas; corola monopétala enrodada ó raras veces de otra forma, mas ó menos in- fundibiliforme, con 5 divisiones iguales y cuyo tubo, mas órnenos corto, lleva 5 estambres esertos, raramente epíjinos, pero sí períji- nos y alternos, con lóbulos del limbo corolar; prefloracion empizar- rada; pistih) único formado de un ovario infero cuyo ápice lleva un estilo simple terminado por 1 ó por 3 estigmas; el fruto es un nucu- lanio, uiicular 3^ con tres huesecitos ó una drupita monosperma; embrión pequeño contenido en un endospermo córneo ó carnudo. Tribu 1\ — Sambucíneas. — Corola regular enrodada ó formada de 5 pétalos iguales soldados por la base solamente, raras veces tu- bulosa, estilo nulo y por consiguiente los 3 estigmas son sentados. Sambacus Vir (/¿/liana. C. T. Y., 402. — Tribu 2. — Lonicéreas. — Corola tubulosa frecuentemente irregular y no enrodada; estilo fi- liforme terminado por 3 estigmas libres ó reunidos en uno solo. CLASE XXYIII. — COFFÍNEYS. Familia &Z. — RUBIÁCEAS. — Plantas herbáceas anuales ó vivaces, matas, fructices, arbustos, arbolitos y hasta árboles muy grandes y corpulentos, dé hojas simples, enteras, cuya figura, con- sistencia y tamaño varian muchísimo, pero por lo común mas ó me- nos lanceoladas y coriáceas, lampiñas ó pubescentes, lustrosas ó no, pecioladas ó mas raras veces sentadas, opuestas ó verticiladas, acompañadas de dos o mas estípulas situadas entre la inserción de los nociólos con cuva base están frecuentemente soldados, de ma- ñera que las hojas se hallan trabadas; otras veces forman así una especie de vainita que abraza el ramo, ó libres, de fiíjura y tamaño muy variados : suelen faltar, algunas raras veces. Flores siempre hermafroditas, cuya inflorescencia varía mucho ; en efecto, están 128 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. tan pronto en grupos axilares como solitarias; espigadas como ar- racimadas, en cabezas como en cimas ó en panojas, y se componen de un cáliz adherente, cuyo limbo, raras veces entero, es ordinaria- mente partido en 4, ó mas raras veces en 5 lóbulos mas ó menos profundos, reemplazados á veces por igual número de dientecitos; corola regular mas ó menos grande, cuya ñgura y tamaño varían muchísimo, de limbo dividido en 4ó5 lóbulos mas órnenos profundos de prefloracion torcida ó valvar. Estambres perijinos 4 ó 5 soldados con el tubo de la corola y raras veces libres de ella, inclusos ó eser- tos, alternando con las divisiones de la corola y de anteras bilocula- res que se abren por una grieta lonjitudinal. Pistilo único formado de un ovario infero, raras veces libre, por encima de la base, y al- gunas veces coronado por un disco carnudo atravesado por el estilo, bilocular, mono ó polispermo , cuyo vértice lleva un estilo simple, pero cuyo ápice está bastantes veces partido en tantas divisiones cuantas celdillas hay, terminándose por un estigma ordinariamente cabezudo. El fruto varía tanto por su clase como por su forma, ta- maño y consistencia: en efecto, es tan pronto seco y formado de dos carpelos ó aquenios aplicados el uno al otro y separables, ó capsu- lar como carnudo, abayado ó drupáceo, con dos ó con algunas cel- dillas, con una ó con muchas semillas; tales frutos, cualquiera que sea su clase, son siempre coronados por el limbo calicinal persis- tente ; semillas algunas raras veces provistas de un ala membranosa, pero ordinariamente desnudas y formadas, además de su tegumento propio ó epispermo, de un embrión central y derecho alojado en un endospermo córneo ó carnudo ; otras veces estáf situado transversal- mente respecto del hilo. Análisis dicotómica de los órdenes y tribus. 1. Celdillas con uno y raras veces con dos huevecillos, 2. — Cel- dillas polispermas ó con muchos hucvecillos, 10. 2. Árboles ó arbustos, á veces irataa y hasta plantas herbáceas, con hojas opuestas casi siempre, con estípulas enterpeciolares, ca- ducas ó persistentes, libres ó trabada^s con la base de los peciolos, otras raras veces verticiladas. Frutos drupáceos mas ó menos car- nudos, cuyas dos celdas contienen una nuececita mas ó menos dura, huesosa ó córnea, cuya semilla es ordinariamente allanada y asur- cada por la cara interna, mientras la esterior es convexa; aveces por casualidad ó por causa de aborto, la nuececita es única y enton- ces las dos semillas conten iuí^^.^t^x las celdillas son erguidas, depri- midas ó lateralmente adherentes: endospermo córneo mas ó menos desarrollado ; otras veces el fruto es seco y formado de dos capelos que al madurar se separan el uno del otro ó se quedan pegados. O. 1<». COFFEÁCEAS, 3. 3. Hojas opuestas y con estípulas entrepeciolares, 4. — Hojas verticiladas y sin estípulas; plantas herbáceas anuales ó vivaces: fruto seco ó abayado, cuyas semillas son provistas de un endosper- mo córneo que contiene un embrión de raicilla inferior; huevecillos DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVII. COFFINEAS.*^ 129 lateralmente pegados. T. I. Estrelladas ó Gallíeas. Que consti- tuye la familia de las galliáceas de Lindley. Rubia tinctorur/iy L.; común en los páramos de Mérida. 4. De fruto carnudo, 5. — De fruto seco, 9. 5. Semillas sin endospermo, ordinariamente cilindricas, cubier- tas por el funículo vuelto grandecito; embrión de raicilla larga y con cotiledones cortos; fruto drupáceo; huevecillos colgantes; in- florescencia ordinariamente axilar; árboles ó arbustos de hoja.> opuestas ordinariamente, pero algunas veces verticiladas por 3 ó 4, con estípulas entrepeciolares. T. II. Guettárdeas. — Strurtrpfia marilima, Jaeq. : C. T. Y., 284. — Semillas provistas siempre de endospermo, 6. 6. Huevecillos colgantes, 7. — Huevecillos nunca colgantes, pero laterales ó derechos, 8. 7. Corola de prefloracion empizarrada, embrión pequeño, arboli- tos, arbustos ó bejucos de estípulas reunidas con los peciolos y for- mando una vajinita persistente; inflorescencia axilar en cimas ama- nojadas ó arracimadas; fruto drupáceo ó abayado. T. III. Chiocóc- CEAS. k, — Corola de estivacion valvar; embrión pequeñito incluso en ei endospermo; estípulas caedizas; inflorescencia axilar en pa- nojas tricótomas; arbustos ó bejucos; fruto siempre drupáceo. T. IV. Vanguieríeas. 8. Laterales; corola torcida; embrión regular incluso en el en- dospermo, arqueado ó derecho, de radícula inferior y cotiledones foliáceos; estípulas persistentes apiculadas; arbolitos ó arbustos. T. V. IxÓEEAS ó Cóffeas. — Coffea Arábica, L. : C. T. V., 260. — Erguidos y derechos raras veces, pegados por encima de la ba.-e de la celdilla, corola de lóbulos valvares ; embrión regular incluso en el endotpei'mo carnudo ó cartilajinoso ; estípulas enteramente per- sistentes» ó cuya parte superior es caediza ó marcescentes, conivente? por la base y formando una vajinita ó libres ; flores de inflorescen- cia axilar ó terminal, en corimbos u ómbelas, en panojas ó lacimos, algunas veces en cabezuelas ; plantas herbáceas, matas, arbustos v ha&ta árboles. T. YI. Psichotrieas. B. 9. Raicilla superior del embrión inclusa en un endospermo car- noso; lóbulos de la corola de prelloi^acion empizarrada; arbustos frecuentemente espinosos ó matas; flores en cimas acorimbadas ter- minales ó en cabezas; fruto formado de dos carpelos mas ó menos prismáticos, situados en un carpóforo. T. YII. Cefalánteas. — Cephalantlius. — Huevecillos lateralmente pegados; embrión regu- lar contenido en un endospermo cartilajinoso y de raicilla inferior: lóbulos de la corola de estivacion valvar; estípulas cerdosas persis- tentes, cuya base forma vajinita; inflorescencia axilar ó terminal, en grupos, encimasó enca])ezuelassolitarias óapanojadas; fruto cap- sular ó formado de dos carpelos indehiscenttís. T. YIÍI. Esperma- CÓCEAS. E. 10. Árboles, arbustos, frútices, matas y á veces plantas herbá- ceas, con hojas opuestas ó verticiladas algunas veces; estípulas interpeciolar-es, libres ó las m-as veces trababas ; fruto capsular, aba- yado ó drupáceo, con semillas aladas ó no en el primer caso y nunca TUMO n 9 130 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. aladas en el segundo, Lilocular ó multilocular. Ór. 11. Cinchoná- CEAS. II. Fruto carnudo, 12. — Fruto capsular, l-i* 1*2. Placentas ó trofospermos parietales con algunas semillas ; lóbulos d^ la corola de estivacion torcida ó empizarrada; estípulas interpeciolares persistentes ó raras veces caedizas; inflorescencia terminal, acorimbada ó aracimada, á veces solitaria; baja con dos celdillas conteniendo algunas semillas ; arbustos ó árboles bastante grandes. T. I. Gardeníeas, F. — Placentas ó trofospermos centra- les, 13. 13. Con muchos huevecillos ó 2 solamente, engastados ó unidos en él; prefloracion de los lóbulos de la corola empizarrada ó torci- da; flores corimbosas, arracimadas ó solitarias y dispuestas en ca- bezas involucradas terminales; fruto abajado ordinariamente bilo- cular, algunas veces bi-4: j4-5 locular, con algunas semillas j rara vez .una sola; arbustos ó árboles con estípulas interpeciolares. T. II. Randíea.s, H. — Huevecillos superficiales, 14. 14. Lóbulos de la corola de prefloracion empizarrada ; muchos huevecillos situados por la periferie del placenta; fruto con dos cel- das ó con 4-5 ó 6 de semillas pequeñas ; sarcocarpio espesito; flores ordinariamente en cimas terminales, en panojas ó en racimos, á veces con algunos brazos escorpioídeos, es decir, rollados; arbustos ordinariamente, raras veces árboles; estípulas interpeciolares. T. III. Hamelíeas. i. — Lóbulos déla corola de estivacion valvar; muchos huevecillos sobre la superficie placentaria; baja bi 4-5 lo- cular polisperma ; poco carnoso el sarcocarpio; fiores axilares ama- nojadas ó agrupadas ; arbustos abejucados ó yerbas rastreras; estí- pulas enterpeciolares.T.IV. — ^abicíe as . Coccoci/j^seluin rejJenSjSw. 15. Et«típulas enterpeciolares libres, 16. — Estípulas trabadas ó reunidas con los peciolos y con cerdas, 17. 16. Corola de estivacion valvar; cápsula bilocular con muchas semillas comprimidas y provistas de una membranita marjinal, á veces prolongada en colita por ambos estremos; loculícida ó septí- cida; inflorescencia ordinariamente corimbosa; arbustos ó árboles cuyas estípulas entrepeciolares son caedizas. T. V. Cincóneas, J. — Corola de prefloracion valvar, cápsula bilocular polisperma, septí- cida ó loculícida, con semillas provistas de un ala ó sin ella y raras veces con una colita; inflorescencia terminal ó axilar, acorimbada, arracimada, apanojada, ó flores solitarias en los pedúnculos; arbus- tos ó árboles y rara vez plantas herbáceas de estípulas enterpecio- lares. T. VI. RONDELETÍEAS. K. 11. Cápsula loculícida por el vértice, un poco espesa, bi-locular y con muchas semillas; flores axilares solitarias y mas ó menos pe- dunculadas; plantas herbáceas. T. VIL Hediotídeas. L. Oldenlendia. L. K.-G.-I. — Yerba anual lampiña ó alampiñada cuyo tallo delgado y ramoso se eleva como á 1' 1[2 de alto y lleva hojas lanceoladas ó lineares sentadas, 1 nerviasy terminándose infe- riormente en vaina, largas de 1" ; estípulas formadas de 3 cerdas; flo- res blancas en umbelas ó corimbos, con 2 ó 5 pedicelos filiformes, ordi- nariamente mas cortos que los pedúnculos; de corola de 1"', cuyos DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXVII. COFFÍNEAS. 131 lóbulos son tan largos como el tubo; anteras ovoideas; cápsula trunca, sub-globosas, aguzada y con un diente lanceolado. O. cnrymhosa, L.: C.T. V.834:. — Yerba anual lampiña de tallo delgado, déltil, alto como de r, no ramoso y con hojas lanceoladas ó linear-lanceoladas, agu- zadas, uninervias, largas de 1 á 2"; estípulas con algunas cerdas 6 reducidas; flores de pedicelos sub-solitarias v largas como de 8'", filiformes ordinariamente escediendo las hojas; de corola mitad tan larga como el tubo; anteras ovoideas, cápsula globosa, estrechada hacia las comisuras, diente lanceolado j aguzado. O. herliacea De. — O. tenuifolia, Forst. — Hedyotis Heynii, Br. A. — G. II. — Erithalis, P. Br. Arbusto ó arbolito ramoso, de hojas obovales ó espatulado-lanceoladas , obturas ú obtu- sitas, largas de 3 á 4", lustrosas, cortamente pecioladas; flores de limbo calizinal ondeado sub-trunco , de corola con las divisiones oblongo-lineares ó lanceolado-oblongas y largas de 4'" ; carpidlos 6- 10-20. — E.fmcticosa, L. — B. odorífera, Jacq.: C. T. V. 367. — Arbusto de hojas elíptico-lanceoladas ó lanceoladas, aguzadas por ambos estremos, largas de 3-4" sobre 1" de ancho; flores cuyo cáliz tiene el limbo con 5 dientes, deltoídeas y de corola con divisiones óvalo4anceoladas ; carpidlos 5-6. E . (mgustifolia, De. G. III. Chioccoca. — P. Br. Arbuttode tallo muy ramoso, sarmen- toso, alto de 4' á 10' con hojas como apergaminadas elípticas ú oval- lanceoladas, cortamente acuñadas por la base, de vértice mas ó menos acuminado-obtusito ó algo puntiagudo ; estípulas cuyo muero ó punta es mas corta que su vainita ó tan larga como ella; flores blancas peque- ñas, en racimos oblongos tan largos como las hojas, ordinariamente compuestos, con 2 brácteas bi-dentaclas, situadas por la base, de cá- liz con dientes deltoideos, de corola 5-loba ó 5-fida cuyas divisiones son óvalo-lanceoladas : anteras lanudas é inclusas en el tubo de la corola ; baya orbicular blanca con 2-3'" de diámetro. C . racemosa, Jacq. : C. T. Y., 368. — Bejuco largo y bastante alto, de ramos larguísimos y horizontales que llevan hojas pequeñas ovales ú oval- oblongas, cortamente acuñadas por la base y cuyo vértice se ter- mina en una punta obtusita ; largas de 8'" á 1" ; estípulas alesnadas y mas largas que su vaina; flores blancas pequeñas, en racimos flojos, simples, mas cortos que las hojas, provistas de dos brácteas dentadas situadas por la base ; dientes calizinales deltoídeo-ovales y obtusitas; corola con 5 lóbulos lanceolados ú óvalo-lanceolados y cuyo tubo está superado por los ápices puntiagudos de las anteras; baya blanca orbicular y de 2'" de diámetro. C . parTÍfolia, Yallschl. — C. racemosa, Yar. SÁv. — C . racemosa, Sieb.: C. T. Y., 368. B. PsiCHOTEÍEAS. — Florcs sin involucro alguno. S.-T. I. Psi- COTRÍEAS lejítimas Ó EupsicOTRÍEAS. C. — Florcs dispucstas en cabezas ó en grupos terminales provistos de un involucro. S.-T. JI. Cefaelídeas. 1). C. — G. lY. Psyciiotria, L. — 1. Huesitos ó pirenas de la baya separables los unos de los otros según el eje,lijeramente encorvados por la comisura, apenas 5 crestados, ó 4-asurcados, ó lisos por el dorso, endospermo sin surcos por el lado cóncavo ó allanado de la comisu- ra; arbubtos á veces abejucados, con estípulas sub-cartilajinosas, 132 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS . lanudas ó do vaina marcesconte ; flores en panojas ó cinias termina- les 2. — Hnesitos ó pirenas de la baja no separables, 3. » 2. Arb^^tillo lampiño de hojas membranosas, lanceoladas ó es- patulado-lanceoladas, obtusitas, con venas arqueadas, largas de 2- 4" y aguzándose gradualmente por la base hasta volverse peciolo : estípulas pequeñas, curtilajinosas, deltoídeas, 2 por cada lado, ó una sola, pero reventándose en 2 divisiones ; cimas con tres brazos pau- cífloros; flores en racimitos con bracteitas; limbo calizinal dilatado, subentero y mas largo que el tubo : lóbulos de la corola 1[3 mas largos que el tubo ; baya globosa, cabizbaja y de 2'" de diámetro, cuyos pirenas son lisas ó ligeramente 5-crestaditas. P. nutans, Sw. — Frútice ó mata leñosa lampiña que se eleva á 1 ó 4' de altura, de ramos entendidos que llevan hojas membranosas, elípticas ó elíptico- oblongas, puntiagudas, con venas arqueadas, largas de 1 lf2 á 3", de cara inferior, con pelo en la axila de las nervaduras ; estípulas redondeaditas, dentaditas, una por cada lado, marcescentes, con los dientes deciduos, y por fin volviéndose cartilajinosas ; cimas 2 veces con 3 brazos paucífloros, con las flores en racimitos, de limbo calizi- nal dilatado, finamente dentadito y mas largo que el tubo; corola hipocrateri forme, tramsversalmente aplicada en la garganta, lam- piña, de tubo largo de 2'" 1{2 y 1{3 mas corto que los lóbulos de ella; baya oval- globosa, por último casi lisa, erguida y de 2'" de diámetro. P. horizo7italis, Sw. 3. Involutas ó rolladas á manera de espiral perlas comisuras, 4. — Nunca jamas rolladas ó involutas, 9. 4. Estípulas deciduas, con la base corta persistente ; endospermo camfilótropo y penetrando en la parte rollada de las pirenas ; flores en panojas terminales, formadas de racimitos distantes, con bractei- tas pequeñitas y terminales, de brazos estendidos, 5. — E;^típulas persistentes mellizas ó bítídas; la espiral de la márjen de los huese- citos formada por causa de un surco grande situado en la comisura ; endospermo como en el precedente; panojas terminales cuyas flores son aracimadas, 6. 5. Arbustillo lampiño, jaspeado y glauco, cuyas ramas cilindricas y lisas llevan hojasapergaminadas, oval-oblongas, redondeadas por la base y obtusitas por el vértice, con venas costilludas y distantes, largas de 8-3" sobre 4"-l 1\2" de ancho, lustrosasy de cara inferior abigarrada con puntitos negros, de peciolos largosde 2"-l{2; panojas flojas, tan largas como las hojas, formadas de racimitos compue>tos de algunas flores, ordinariamente distantes de 6-12'" las unas de las otras, y de brazos verticilados por á 5 ó á 3: flores de limbo calizinal 5-dentado y porfín 5-fido ; corola larga de 1'" lf2, cuyoí« lóbulos son dos veces mas cortos que el tubo; anteras oblongas; baya oblonga- elipsoídea larga de 3'", lisa y coronada por el limbo calizinal. P.fce- tida, Gr. — P. fcetens, Sw. — P. Browei, Hb. 6. Brácteas grandes y escediendo el cáliz, 7. — Bracteitas peque- ñas ó apenas notables, 8. "7. Arbusto de unos 6 á 8' de altura, lampiño, cuyos ramos, lijera- mente tetrágonos, llevan hojas apergaminadas eliptical-oblong.is ('» lanceolado-oblongas, puntiagudas, largas de 5-4", con peciolos de 3 DICOTILEDÓ-NEOS. — CLASE XXV'U. COFl-ílNEAS . 133 á 6'" de largo y cujas venas son arqueadas ; estípulas reunidas por la T)ase cortamente bífidas y persistentes, largas de 3'"; panojas pe- dunculadas, peludas, cuyos brazos estendidos llevan por el vértice racimitos temados é involucrados, cuvas bracteitas ovales son un poco mas largas que el cáliz ; flores de color amarillo pálido, de corola larga de 2'" li2, alampiñada interiormente, cuyos lóbulo^ pubescen- titos son mas cortos que el tubo infundibuliforme ; anteras oblongas é inclusas, baya ovoidea, de color de añil y coronada por el limbo calizinal sub-entero ; pirenas ó liuesecitos con 5 crestitas. P. hra- chiata, Sw. — P. capitata, De. 8. Arbustito lampiño de ramos cilindricos y un poco estrechados, que llevan hojas apergaminadas eliptical-oblongas ó elípticas, pun- tiagudas, largas de 4-3", con las venas arqueadas; estípulas 2 de cada lado, lineares y aguzadas, mucho mas largas que la vainita que for- man por la reunión de su base y persistentes, largas de 1 á '¿"\ pa- nojas largamente pedunculadas corimbiformes, deluazos coloridos y terminados por cimas escorpioídeas y flares sentadas, acompañadas de bracteitas lanceolado-lineares tan largas como el cáliz ó escedién- dole un poquito ; corola blanca, glabra en la garganta, larga de 2'" y cuyos lóbulos son la mitad tan largos como el tubo, con figura de ma- ceta; anteras lineares; baya redondeadita, negra, de 1-2'" de diá- metro, contraída en las comisuras, transversalmente rugosita, con huesecitos 5 angulosos. P. patens, Sw. 9. Huesecitos ó pirenas comprimidos por el dorso y con 3 crestas, cuyas laterales son contiguas con los ángulos de las comisuras; en- dospermo plano-comprimido y sin surcos, tallos herbáceos con hojas grandes, estípulas solitarias cuya parte superior es caediza mientras la base persistente forma vaina, 10. — Huesecitos ó pirenas semi- cilíndricos con 5-3 crestas equidistantes; endo^permo asurcado por debajo de las crestas, llanito y con dos surquitos situados en el lado comisural ó sin ellos; estípulas solitarias deciduas de^de la base ó cerca de ella ; panojas terminales con flores diminutamente bracteo- ladas, 11. 10. Yerba sofrutecente ó mata de 2 a 3' de alto, glabra ó alampi- ñada y algo suculenta; de hojas obovales ó elípticas, ordinaria- mente puntiaguditas , costilludo-venosas , largamente pecioladas, largas de 10-6" y con peciolos de 2"; estípulas puntiagudas, panojas axilares tricótomas, de pedvinculos mas ó menos largos, lampiños 6 pubescentitos, formados de flores arracimaditas de color rojo pálido y pequeñas, de limbo cálizinal 5-dentado, y de corola cuya garganta es velluda ; anteras lineares ; baya de color carmesí, oval y por fin algo lisa. P. uliginosa, Sw. — P. lievis, De: C. T. V., 435-4'76. 11 . Estípulas distintas, 12. — Estípulas reunidas y formando una vainita, fiecuentemente diminutas, 13. 12. Mata fruticosa do 3 á 4' de alto, ramosa lampiña 3^ de hojas algo coriáceas ó apergaminadas, elípticas ú oblongas, obtusas ó pun- tiagudas por ambos estremos, largas de 3 á 1" , con venas costillu- das, de cara inferior frecuentemente con grupos de pelo en la axila de las venas ; estípulas anchas, bífidas, largas de 5 á 4'", con divi- siones subuladas y deciduas, con los pelos de la ba^e persistentes; 134 DIVISIÓN SEGL'XCA. FANERÓGAMOS. panojas tricótomas, cortamente pedunciiladas ó subsesiles, formada^; de flores arracimaditas, cuyo limbo calizinal es 5-fido, corola larga de y, cuyos lóbulos son tan largos como el tubo; baya elipsoídea larga de 3 á 4"', de huesecitos blancos, cuyo endospermo tiene dos surcos por la comisura. P. teyíuifolia, Sw. — P. glabra, Sieb. 13. Arbustillo cuya parte superior es herrumbroso-pubescente, con ramos que llevan hojas apergaminadas, lanceolado-elípticas, aguzadas largas de 4" á 2" li2, sobre \" 1|2 de ancho, acostillado- venosas, de cara superior alampiñada, mientras la inferior es algo pelitiesa ó alampiñada entre los nervios; estípulas conadas ó rupti- les, con una vainita diminuta, obovales, frecuentemente puntiagu- das, bífidas, membranoso-herrumbrosas, deciduas, con la base corta marcescente, largas de 6 á 3'"; panojos sésiles y tricótomas, mas cortas que las hojas, formadas de flores en racimitos, cuyo limbo calizinal es diminutamente 5-dentadito, corola larga de 2"', cuyas divisiones son mas cortas que el tubo; baya elipsoídea larga de ^"' j ancha de Y" lj2, de pirenas llanos con endo;«permo bi-asurcado por la comisura. P. rufescens, Kth. — P. Portoricensis, De. G. V. Palicourea, Aubl. — 1. Estípulas persistentes, dos de cada lado, ó reunidas por la base en una vaina ; flores pediceladas, 2. — Estípulas deciduas bi-dentadas ; flores ternadamente arracima- das, 3. 2. Arbustillo ramoso, de unos 6 á 8' de altura, lampiño; base de los ramos cilindrica, mientras el vértice es sub-tetrágono ; hojas apergaminadas elípticas, ó lanceolado-oblongas, puntiagudas, pe- cioladas, á veces lanceolado-elípticas; de nervaduras regularmente arqueadas; estípulas lineares aguzadas, mas largas que la vaina, muy cortas y largas de 1 á 2'"; panojas piramidales, raramente corimbosas, con brazos de color anaranjado, flores del mibmo color, corola lampiña larga de 4 á 6"', cu^'o tubo es cilindrico y con figura de maceta á la vez ; estambres y estilo esertos; ba^-a oval-redon- deadita, lateralmente sub-comprimida. P. crocea, De. — P. croceoi- des, Ham.: C. T. Y., 482. 3. Mata fruticosa, lampiña, que se eleva á unos 5 ó 6' de altura, lisa y con los entrenudos cilindricos; hojas membranosas lanceola- do-oblongas ó elíptico-oblongas, puntiagudas, pecioladas, de nerva- duras arqueadas y distantes; estípulas diminutas, sub-distintas y de divisiones deltoídeas ; panojas acorimbadas, de flores blancas olo- rosas j temadas, subsesiles hacia el ápice de los brazos, de corola lampiña, hipocrateriforme, cuyo tubo, largo de 6'", filiforme y con figura de maceta á la vez, es algo arqueado, lóbulos desiguales oblongo-lanceolados 1|3 tan largos como el tubo; baya sub-globosa, lateralmente sub-comprimida. P. pavetta, De. — Psycliotria fd- tetta^ Sw. — Pavetta jocntanclra, Sw. D. — G VI. Cephaelis, Sw. — Bayas casi lisas; pirenas y epis- permo planos, ó lijeramente encorvados por la comisura ; brácteas involúcrales reunidas por la base, abiertas y coloridas, 2. — Pirenas obtusamente 5-estriad&s y enrolladas por la comisura; endospermo campilótropo, penetrando un poco en la parte rollada; brácteas in- DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXTII. COFFINEAS. 135 Tolucrales distintas ó casi distintas, tan largas ó mas cortas que las flores, 3. 2. Arbusto lampiño de 12 a 15' de alto, de entrenudos tetrágonos, CUTOS ramos llevan hojas eliptical- oblongas, con una punta corta y obtiisita, largas de 6 á 3" ; ettípulas tan largas como su vaina, axi- lares, redondas, obtusamente 2-lobadas, abiertas y largas de 2'" ; flores en cabezas terminales, largamente pedunculadas, de 8 á 6'"" de diámetro ; involucro purpúreo cujas dos divisiones grandes, an- chamente ovales y obtusitas, son mucho mas largas que las flores. C. pitnicea, \ . — C . elata, Sw. 3. Arbusto que se eleva hasta 15' de altura, lampiño, de ramos cuyos entrenudos son cilindricos, mientras la sumidad sub-tetrago- nal lleva hojas cortamente pecioladas, lanceolado-oblongas, aguza- das y largas de 4 á 3" ; vaina estipular trunca, abierta j provista de algunas aristas tiesas y deciduas ; cabezas florales terminales y sub- sesiles, de brácteas azul pálido, cuadradas así como las pajitas y cortadas por el vértice; flores blancas y bayas azules. C. mvscosa, Sw. — Morinda muscosa, Jacq.: C. T. Y., 434. — Arbustillo lam- piño de entrenudos obtusamente sub-tetrágonos, cuyos ramitos lle- van hojas largamente pecioladas, lanceolado-oblongas ó elípticas, largas de 5 á 3", con el peciolo de 12'", puntiagudas: estípulas tan largas como su vaina, ovales, 2-lobas y sin aristas; cabezas florales ordinariamente axilares, sentadas y de 10 á 6'" de diámetro, cuyas brácteas, involúcrales redondeadas, son mas cortitas que las flores ; pajitas obóvales de vértice laciniado ó pestañoso; baya sub-globosa con surcos. C. axillarís, Sw. G. V. II. MoEiNDA,L. — Matafruticosade como l'dealto, lampiña ó alampiñada, cuyos ramos cilindricos llevan hojas lanceolado-oblon- gas, puntiagudas y largas de 3-2"; estípulas subuladas; cabezasflorales pequeñas, solitarias en las axilasó terminales mas largas que su pe- dúnculo, que tiene solamente 1 ó 3'" de largo, formadas de flores blancas y olorosas; frutos í.iiobosos de 4 á 6'" de diámetro. M. rovoc, L. : C. T. Y., 510. Yejetal arborecente, glabro, de ramitas tetrágonas que llevan hojas grandes, elípticas, puntiagudas ú obtusas, largas de 6 á 8"; estípulas redondeaditas; cabezas florales opuestas á las hojas ó axi- lares, casi tan largas como su pedúnculo que tiene solo ó á 8'" de largo; fruto sub-globoso de 1" de diámetro. 31. citrifoUa, L. — M, rnacrophylla, Desf. Ct. YIII. Geophila feniformis, Don.: C. T. Y., 483. G. IX. Richardsoiiia, Kth. — Planta herbácea anual, detallo de- recho y erguido, de como 2' de alto, tricótomo y ramoso, con pelo tieso y de hojas elíptico-lanceoladas, puntiagudas y atenuadas por la base que se vuelve peciolo, pelitiesas; estípulas truncas con cer- das tiesas; cabezas florales, cuyo involucro consta de 2 ó 3 hojas ó brácteas foliáceas ovales y sésiles ; fruto formado de 3 cajitas tuber- culobO-punteaditas ; limbo calicinal 6-partido y cerdoso. H. Cuhen- sis, Rich. — Tallo peludo con hojas lanceolado-oblongas ó elípticas; cerdas estipulares tan largas como su corta vaina; cabezas florales con algunas flores blancas, de cáliz con 6 divisiones foliáceas ovalo- 136 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. (leltoídeas, ian largo como el fruto truncado-obval, erizado j for- mado de 3 H 4 carpelos ; corola con 6 lóbulos de estambres e¿ertos. ^. scah-a, L. : C. T. Y. 483. E. — G. X. Spermacoce tenuior, Lam . — S. stricta,L. C, T. Y. 484. G. XI. DiODiA, L. 1. Hojas sentadas y sin venas, 2. — Hojas cortamente pecioladas, áspero-venosas, 3. 2. Yerba anual pinchuda, de tallo delgado, como de 6", con hojas lineares de márjen revoluta; cerdas estipulares setáceas, mas largas ([ue su vaina: flores axilares blancas ó teñidas de púrpura, sub-soli- tarias, de cáliz con 4 lobos deltoídeo-lanceolados y mas cortos que los carpelos, sin estrias laterales: tubo de la corola delgado y obo- val ; fruto sub-globoso, lijeramente aquilado, áspero y erizado. D. próstata, Sw. — Spermacoce strigosa, L. 3. Vejetal casi leñoso, algo trepador, muy ramoso, de tallo y ra- mos obtusamente tetrágonos, ásperos por los ángulos, ordinaria- mente peludo ó alampiñado, con hojas ol)longo-lanceoladas, punti- agudas, á.-pero-venosas, con 4-5 pares de venas arqueadas, ásperas; cerdas estipulares peludo-setáceas : flores axilares en grupos de 5, de cáliz con 4 lobos lanceolados, lf2 ó 1¡3 tan largos como los carpelos : corola blanca de tubo corto casi tan largo como las divisiones calizina- les; fruto ovoídeo-oblongo, sin estrias, alampiñadoy áspero, i).. s^rwew- tosa, Sw. — Spermacoce spinosa, Loef. — Borrera perrotettii, De. G. XII. BoRREEA, Miq.l. Cápsula septícidapor arriba del centro, con los carpelos persictentes por debajo de él, 2. — Cápsula septí- cida hasta la base y cuyos carpelo^ se desprenden, 3. 2. Planta herbácea ó sofrutescente alampiñada, cuyo tallo sub-ci- líndrico ó lijeramente anguloso, tiene hojas elíptico-lanceoladas ó lanceoladas, aguzadas, con o ó 1 pares de venas; cerdas estipulares setáceas, lampiñas mas cortas que su vaina, prolongadas ó tan largas como ella; flores en verticilos, ó cabecitas, formados de algunas flores, con cáliz de 4 dientes diminutos, iguales, ovales, obtusitos y muclio mas cortos que el fruto obovalgloboso, cuyas semillas oblon- gas son estriado-asurcadas transversalmente. B. Icevis , Gr. — Spermac'ce Javis, Lam. — >S'. tenuior, Sw. — B. xirgata, Cham. 3. Yerba anual alampiñada, cuyo tallo tetrágono, largo como de 1' y ramoso, lleva hojas oblongo-lanceoladas ó elípticas, obtusas ó puntiagudas, muy variables, subsesiles ó cortamente pecioladas, con 5 pares de venas; cerdas estipulares setáceas y mas largas que su vaina; vpitícilos ó cabezas formados de algunas flores de cáliz con 4 dientes lanceolado-subulados, casi tan largos como el fruto oboval, cuyas semillas diminutas son oblongas y escrobiculadas, es decir que parecen pólvora. B. partiflora , Miq. — Yerba vivaz sofruticosa alampiñada, cuyo tallo tetrágono se eleva de V á 4' de altura:^ hojas linear-lanceoladas, cortamente aguzadas, largas de 1" li2 á 1" sobre 3 ó 2'" de anclio, sentadas con venas distantes y sub-biyugadas; cerdas estipulares setáceas, tan largas ó mas cortas que su vaina; cabezas floialesy verticilos accesorios globosos y de (V" de diámetro, provistos de un involucro forma'^^.o de 2 hojas; flores blancas de cáliz con 2 á 4 dientes lanceolados y obtusitos, la mitad tan largos como el DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVII. — COFFÍNEAS. 131 fruto ovaloblüDC'o, cuvas semillas ohlonco-lineares son redondeadi- tas. B. vertici'lata, Mey. — Sperm. rerticillata, Sw. Y. — G. XIIÍ. Genipa. L. — 1. Árboles bastante grandes, ra- mosos y coposos, 2. — Arbusto de hojas obovales, lampiñas y sub- truncas por el vértice, largas de 4 á 2" ; flores en corimbos corta- mente pedunculados, cuyos pedicelos son tan largos como el cáliz, de limbo 5-fido, con los lóbulos lineares y distantes; corola lampiña, de tubo eserto largo de 6'" y casi tanto como los lóbulos del limbo; anteras semi-esertas ; estigma bífido, de divisiones lanceolado-setá- ceas; ba3'a ovoidea. G. clusiifolia, Gr. 2. Hojas lanceolado-oblongas, glabras y largas de 5 á 10" sobre 3-2" de ancho, algo aguzadas por ambos estremos, pecioladas; flores amarillentas en corimbos cortamente pedunculados, con pedicelos mas cortos que el cáliz trunco ; corola sedosa y peli erizad a por la ffare-anta, de tubo cortamente eserto y tan largos como sus lóbulos estendidos; anteras esertas ; estigma con figura de maceta; baya ovoidea, un poco fusiforme, larga de 4 á 5" sobre 2" de diámetro transversal. G. Americana, L.: C. T. V., 87. — Hojas obovales, lar- gas de 6 á 8" sobre 3 l|2ó 2" de ancho, alampiñadas ó de cara infe- rior pubescente ; flores en corimbos cortamente pedunculados, cuyos pedicelos son tan largos como el cáliz trunco ondeado ó dentado ; corola pincliudo-tomentosa esterior é interiormente, de tubo corta- mente eserto, tan largos como los lóbulos: anteras esertas, estigma claviforme ; baya ovaloblonga. G. caruto, Kth.: C. T.Y , 87. H. G. XIV. Randia, L. 1. Limbo de la corola torcido por la izquierda y de tubo cilindrico ó gradualmente ensanchado, 2. — Co- rola de limbo con estivacion torcido -empizarrada, cuyo tubo largo y cilindrico está bruscamente dilatado por la garganta, 3. 2. Arbusto alto de 10 á 15', ramosísimo, cuyos ramos estendidos y dispuestos ordinariamente á manera de pirámide, son espinosos ó inermes, de espinas opuestas y supra-axilares ; hojas oljovales ó elípticas, por fin coriáceas, lampiñas y largas de 1 á 3"; flores de olor muy agradable y suave análogo al del azahar, axilares, terna- das, subsesiles ó laterales, cuyo limbo calizinal, cortamente acam- panado, tiene dientes lanceolados, obtusitos y encorvados, de corola cuyo tubo sub-cilíndrico y largo de 2 á 4"', velludo interiormente, tiene la misma lonjitud ó es dos veces mas largo que los lóbulos ovaloblongos ú ovales : anteras lineares; baya globosa ú ovoidea. R. acuIeata,L — B. milis, Lam.; C. T. V., 85. — Arbustos cuyas ramitas llevan por del)aj'o de su vértice espinas en verticilo de á4; hojas ovales ó elípticas, puntiagudas membranosas, alampiñadas, largas de 3 á 2", con la cara inferior pubescentita sol)re las nerva- duras: flores blancas en grupos terminales, cuyo limlio calizinal largo de 3 á G"' es 5-partido. con los lobos lineares y abiertos; tubo de la corola largo de 12"', cilíndrico-lampiño por la garganta, y cua- tro veces mas largo que los lóbulos ovalo-lanceolados del limbo su- buliforme en la estivacion; baya ovoídeo-redondita. R. armattí,^ De. — Gardenia armata, Sw. — Mv.sanida spinosa, Jacq. 3. Arbusto inerme de hojas lanceolado-elípticas ó lanceoladas, largas de 1 á 3"', membranosas y de cara inferior pubescente ; flores 38 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. ICC íiolitarias en el ápice reducido de las ramitas, sentadas, cuyo limbo calizinal de 2'" y 5-fido tiene sus lóbulos distantes, subulado-setáceos y erguidos; tubo de la corola largo de 2 á 3"', esteriormente pubes- cente y velludo por la garganta y 2 á 4 veces tan largo como los lóbulos ovales y puntiagudos del limbo ; baya larga de una línea alampi fiada y ovoidea, i^. Moiisscendce, De. — Motisscendaformosa, Jacq. C. T. V. 86. 1. Hamelíeas. G. XV. Hamelia, Jacq. Arbusto de unos 6 ú 8' de altura, ramoso, cuyos ramos pubescentitos y cilindricos llevan hojas verticiladas por á 3-4-5, ú opuestas, elípticas, puntiagudas, largas de 3 á 2" sobre 1 1|2 á 1" de ancho, acuñadas por la base, de cara supe- rior alampiñadita, mientras la inferior es pubescente ó alampiñada; flores en cimas de 3 á 4 brazos, frecuentemente dicótomos, cuya flor del centro es sub-sentada, de color carmesí; tubo calizinal oval mucho mas largo que su muy corto pedicelo, corola larga de 12'" á 6''', de tubo pubescentito ó alampiñado, tubuloso, sub-cilíndrico j mucho mas largo que los lóbulos dentiformes y algo erguidos del limbo; baya ovoidea. H. pateáis, Jacq : C. T. Y., 88 Planta ó ar- bustivo de 3 á 4' de alto, muy ramoso y lampiño, de hojas opuestas, elípticas, puntiagudas y glabras por ambas caras, lustrosas, un poco venosas, pecioladitas; flores amarillas en cima 3-cótoma inferior- mente, cuyo tubo calizinal acampanado es mucho mas corto que los pedicelos, y de limbo con lóbulos lineares obtusos y abiertos; co- rola larga de 6"', cuyo tubo lampiño es campanudo tubuloto por encima de la base cilindrica y 6 veces mas largo que los lóbulos sub- erguidos; baya ovoidea. H. tutea, Rohr. — H. chrya^itJia, Jacq. — H. axillaris, Svv-. J. G. XVI. Maceconemijm Jamaicense, L. C. T. V. 159. G. XVII. Cinchón A. Árbol cuyo tronco derecho se eleva á 8 ó 15 varas de altura, coposo y de hojas oblongas, por ambos estremos acu- minadas, lampiñas, de cara superior lustrosa, mientras la inferior es glandulosa hacia las axilas de las nervaduras; limbo del cáliz cam- panado y con dientes triangulares; limbo de la corola rosado-la- nudo con los lóbulos color de nieve superiormente ; cápsula oval 2 veces mas larga que ancha; ala de la semilla dentada. Al picarle la corteza sale un suco amarillo. C. Condaminea, K. B. — Árbol alto de 10 á 15 metros y cuyo tronco derecho lleva una copa grande y frondosa; hojas elípticas ú oblongo-obovales obtusas acuñadas por la base, acuminadas, de cara superior lampiña ó alampiñada, mien- tras la inferior es pubescente; dientes del cáliz triangulares; fila- mentos de los estambres iguales; lóbulos del estigma lineares. C. Boliviana, Wedd. C. T. V.^'736. K. RoNDOLETiEAS.G.XVIII.CuTAEEA5;?m6»5¿i, Aubl.:C.T.V.158. L. G. XIX. ExosTEMMA, De. — 1. Árboles mas ó menos grandes; cápsu las ovales ó lanceolado-oblongas; pedicelos iguales al tubo calizinal ó mas largos que él, 2. — Arbustos de 10 á 25' de altura ; cápsulas obovales ú obo val-oblongas; pedicelos tan largos ó mas largos que el tubo calizinal. 3. 2. Pedicelos tan largos como el tubr calizinal cilindrico, cápsula lanceolado- oblonga y lisa, larga de 6'". Árbol alto ramoso y coposo, DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXVII. COFEÍNEAS. 139 lampiño, cu^^as hojas elípticas ú oblongas son largas de 4 á 6" ; flo- res de color rojo pálido en panojas corimbosas cuyos pedicelos tie- nen 4:'" de largo ; tubo de la corola de 14 á 6'" y casi tan largo como los lóbulos del limbo. E . JloHhindnm, R. S.: C. T.V., 155. — Árbol bajito, glabro, ramoso y de hojas obovales ó elípticas y largas de 3 á 6'"; llores de color rojo pálido, acorímbadas y cuyos pedicelos temados ó verticilados por á 3, son mas largos que el tubo calizinal oval y largo de 2'"; tubo de la corola de 2 á V" y dos veces mas largo que los lól)ulos del limbo; cápsula oval con 10 costillas ó es- trias pronunciadas y larga de 8'". E. hracMcarmim, E. S.: G. T. V., par. 156-136. 3. Flores acorimbadasde pedicelos temados tan largos ó cuyo in- ferior es mas largo que el tubo calizinal cilindrico; arbusto lampiño de hojas lanceolado-oblongas, largas de 3 á 2", cuyos peciolos tie- nen solo Z'" de largo; tubo de la corola largo de 8"' y casi tanto como los lóbulos del limbo; cápsula oboval. E. trifiorv.m, G. Don. : C.T. V.. *738. — Flores axilares muy fragantes, de pedicelos axila- res tan largos como el tubo calizinal cilindrico y que lo son de 3'"; tubo de la corola largo de 12 á 16'" y casi tanto como los lóbulos del limbo; arbusto ramoso y derecho, glabro y con hojas elípticas ó lanceolado-elípticas, largas de 2, 3, 1", largamente pecioladas y sub-complicadas; cápsula ovoideo-oblonga y lisa. E . CaTÍbosum, R. S. : C. T.V.,135. , G. XX. AVaeszewiczia coccínea, Kl. — Macronemvm coccinenm, V. — Cülycophyllmii coccinenm, De. — Scorahírghiana, Kl. C T. Y. 741. G. XI. Portlaxdia, P. Br. 1. Lóbulos calizinales, foliáceos, elip- tico-lanceolados; cápsulaeliptica 5-costilluda, 2. — Divisiones ca- lizinales lineares ó lanceolado-aguzadas : cápsula oblonga ó elíptica y lisa, 3. 2. Arbusto de 10 á 15' de alto, de hojas elípticas ó elíptico-oblon- gas, puntiagudas, coriáceas, lustrosas y venosas; estipulas deltoí- deas ú ovales, ñores blanquecinas, olorosas, cuya corola, larga de 8 á 3", lo es á veces tanto como las hojas de la axila de las cuales salen, cortamente peduncuiadas, con el tubo gradualmente cónico, sostiene un limbo de lóbulos redondeado-deltoídeos; anteras largas de 14 á 6'" yíle 1[4 ó de 1|2 menos que los filamentos. P. grandi- flora, L. : C.T.V.,158. 3. Estipulas alesuado-redondeatitas, divisiones calizinales linear- aguzadas; arbusto del tamaño del precedente, de hojas oblongas, puntiagudas, coriáceas, de cara superior lustrosa, con nervaduras arqueadas y venas apenas notables; corola larga de 7 á 8", tanto como las hojas que las llevan en su axila, de tubo gradualmente có- nico y de lóbulos del limbo redondeado-deltoídeos; anteras largas de 2" y la mitad menos que los filamentos ; cápsula oblonga y agu- zada por la base. P. gypsopliyUa, Macf. — P. palantha, Hook. — Arbusto de 2 á 3' de alto solamente, de hojas ovales o eleptical- oblongas, puntiagudas, coriáceas, lustrosas, venosas y largas de 5 á3": estípulas deltoídeas; lóbulos calizinales lanceolado-aguzados; corola de color carmesí, larga de 2", la mitad de la lonjitud de las 140 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. hojas; de tubo aguzado gradualmente cilindrico, con 5 esirias por ]a base; limbo de lóbulos deltoídeos y de 4'" de ancho; anteras lar- gas de 8'" y mitad menos que los filamentos; cápsula elíptica. P^ coccínea, Sw. — Coutarea speciosa, Aubl. : C. T. V., 158. G. XXII. Manettia, L. — 1. Limbocalizinal con8 lóbulos lanceo- ladolinearesj sub-iguales,2. — Limbocalizinal con 4ó5 divisiones, 3. 2. Arbusto lampiño de hojas ovales, acuminadas y cortamente aguzadas por la base y membranosas ; estípulas sub-truncas, denta- ditas ; flores en corimbos pauicífloros axilares, esertos ó reducidos á una solitaria, largamente pedicelados, de corola cuyo tubo sub- cilíndrico es peludo interiormente y barbudo por la garganta; an- teras largas de 4"' y cuya mitad está eserta ; semilla ceñida por una ala recortada. 3f. coccínea, W. C. T. V. 742. 3. Lóbulos calizinales 4, lanceolado lineares y alternando con 4 dientecitos ; arbusto de hojas ovales, puntiagudas tie^^as, reticulado- venosas, de cara inferior, cuya costilla solo es pubescentita; estípu- las cortamente subuladas ; ñores en cimas paucífloras; de corola co- lor de añil, larga de 6"', cuyo tubo cilindrico tiene pelo esparcido por su interior; anteras oblongo-lineares, cuya mitad son esertas y de filamentos cortos; cápsula azul, pero septícida y seca, con semi- llas ceñidas por una ala estrecha y entera. M. lygistrwm, Sw. — Petesía lygístrum, L. — Lygistrum axillare, Lam. — Lóbulos ca- lizinales 4-5 ovales ú óvalo-lanceolados, puntiagudos, perotin dien- tecitos alternando con ellos; arbusto de tallo algo pelierizadito por los ángulos ó alampiñado, de hojas ovales, acuminadas ó puntiagu- das, apergaminadas, de cara inferior glabra ó pelitiesita por la cos- tilla; estípulas deltoideas y dentaditas ; fiores rojas en cimas poci ó pluríñoras, sub-sentadas, cuyos pedicelos son mas largos que los pe- ciolos ó por último elongados; de corola cuyo tubo cilindrico y de vértice claviforme algo peludo interior y esteriormente, sostiene un limbo de divisiones ovales y puntiagudas ; anteras oblongo-lineares inclusas; semillas ceñidas por una ala ancha y dentadiía, M. caly- cosa, Gr. SEGGÍON llí. -IIIPOJINOS. CLASE XXYIII. — ASCLEPIADÍNEAS. Familia 61. — LOGANIÁCEAS. — Arbustos ó arbustillos v raras veces plantas herbáceas, de hojas simples, opuestas, enteras y ordinariamente acompañadas de estipulas interpeciolares, cuya base reunida forma una vaina. Flores racimosas ó corimbosas, ter- minales ó axilares, mas rara vez solitarias, compuestas de un cáliz libre 4-5 lobo; de una corola regular y menos frecuentemente, irre- gular, con 5 y raras veces 4 ó algunas divisiones y de estivacion valvar, torcida ó empizarrada; estambres en número variable inser- tos en el tubo de la corola, con cuyos lóbulos no se hallan siempre simétricos, de anteras biloculares y longitudinalmente dehiscentes; pistilo cuyo ovario libre bi y rarísimamente trilocular ó unicular tiene sus huevecillos anfítropos ó raras veces anátropos, y lleva en DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXVIIT. — ASCLEPIADÍNEAS. 141 SU ápice un estilo simple, terminándose en un estigma simple ó bílobo. Fruto capsular, con las valvas dobladas adentro por la már- jen y placentíferas, ó drupáceo-abayado, cujas semillas, ordinaria- mente abroqueladas y raras veces derechas desde la base, son algu- nas veces aladas y están formadas de un endospermo carnoco ó cartilajinoso y de un embrión recto, de cotiledones foliáceos y cuya raicilla mira al hilo. Análisis clicotómicíi de las órdenes y tridus, etc. 1. Plantas herbáceas ó matas, 2. — Siempre árboles, arbolitos ó arbustos, 5. 2. Yerbas con estípulas ordinariamente ó sin ellas; corola de es- tivacion valvar; caja ó cápsula dídima y polisperma, cuyas semillas sin alas tienen un embrión diminuto con cotiledones apenas visibles. O. I. EspiGELTEAS. Spigelia anthelmia, L. : C. T. V., 828. — Matas ó yerbas á veces sin estípulas, de flores iromeras cuya corola tiene la estivacion convolutiva ó empizarrada quincuncial ó con dos lóbu- los interiores y dos esteriores. O. II. Logonieas, 3. 3. Fruto capsular, 4. — Fruto abayado, 5. 4. Caja bilocular polisperma y septícida, con las valvas ó venta- llas aquiladas, comprimidas y bífldas por el ápice y cu;\as semillas compiiniidas no tienen alas. T, I. Gelsemieas. — Cápsula bilocular septícida y polisperma cuyas semillas abroqueladas no tienen alas. T. II. Euluganieas. 5. Corola de estivacion valvar; embrión regular; árboles, arbus- tos ó bejucos. O. III; EsTRiCNEAS, 6. — Flores anisomeras, de co- rola con estivacion torcida ó empizarrada; baya bilocular, de celdi- llas polispermas; semillas peltadas y ápteras. O. lY. Potalieas. — Potalia amara, Lam. : C. T. Y. 757. 6. De fruto capsular, 7. — De fruto abayado ó drupáceo, 9. 7. Cápsula bilocular, 8. — Caja trilocular polisperma de semillas sin alíís. T. I. Labordieas. 8. ."Cápsula bipartible con las celdillas dobladas hacia adentro por la níárjen y dehiscentes desde el ápice, cuyas semillas, en número de'l ó 2 por celdilla, son abroqueladas y aladas. T. II. Antonieas. — Cápsula bilocular, bipartible y polisperma, cuyas semillas son abroqueladas y aladas; ñores irregulares con un estambre único. T. III. USTERIEAS. 9. Baya bilocular y disperma, cuyas semillas abroqueladas no tienen alas. T. IV. Gardnerieas. — Baya ó drupa bilocular, polis- perma, al^runas veces unilocular por causa de aborto; semillas sin alas. T. Y. Euestricneas. G. Strychnos, L. — 1. Ramos sin zarcillos. 2. — Ramos provistos siempre de zarcillos, 3. '2. Aibübto sarmentoso ó cuyas ramitas abejucadas y de color herrumbroso son tomentosas y llevan hojas óvalo-lanceoladas, agu- zad itas, sub-coriáceus, lustrosas, cortamente pecioladas y largas de "\; flores en racimos compuestos, elongados, axilares ó terminales, A" 142 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. con los pedúnculos horizontales; cálices y frutos tomentosos; fruto globoso, 1-locular polispermo. ;S'. scandens. 3. Arbusto tortuoso de ramas sarmentosas cubiertas de pelos esten- didos, largos j aleonados; de hojas sentadas oval-oblongas, aguzadas membranosas, trinervias, aleonado-pelierizadas por ambas caras, con pelo largo y largas de 3 á 4"; bayas, flores color de fuego ; baya globosa, lampiña, del tamaño de una manzana regular, con 10 á 20 semillas oblicuamente arriñonadas, discoideas y anchas de 1". S. to- xicaría. Rouhamon curare, Aub. : C. T. V. 854. — Arbusto abejucado cuyas ramitas, densamente pubescentitas, llevan hojas coriáceas, ovales ó eliptical-oblongas, con una punta obtusita, complicado- redondeadas por la base, triplinervias, con un par de nervaduras accesorias supra-basilares y de venas dispuestas en redecilla bas- tante preeminente, lampiño-lustrosas y largas de 4 á 3", sobre 2 ó 1 1|2" de ancho, con el peciolo de 2>"' solamente; ñores en cimas tricótomas, axilares y subsesiles, de pedicelos temados y cortos, de cáliz con 4 lóbulos lanceolados y puntiagudos, corola pubescentita, cuyas divisiones lanceoladas y muy barbudas por la base, son 1¡3 tan largas como el tubo filiforme y largo de '¿"' ; anteras y estilo un poco esertos; estigma emarjinado piriforme. S. Trinitensis, Gr. Familia 62. — ÁSCLEPIADACEAS. — Plantas herbáceas anuales ó perennes, matas, sofrutices, bejucos y raras veces arbus- tos ó árboles, cuya savia es casi siempre lechosa; de hojas opuestas, por casualidad verticiladas por á 3, 4 y 5 ; á veces alternas, simples intejérrimas, mas ó menos pecioladas, alguna vez que otra glandu- líferas; estípulas apenas pronunciadas y con frecuencia reducidas á la presencia de una hilera de pelo transversalmente situada. Inflo- rescencia estra-axilar y mas rara vez axilar, indefinida ó en raci- mos, corimbos y ordinariamente en especie de umbela ó cima, cuyos pedúnculos y pedicelos están provistos de brácteas situadas por la base; de flores rojas, anaranjadas, amarillas, blancas y raras veces azules, cuyo olores ordinariamente agradable, que constan de un cáliz monosépalo 5-partido, cuyas divisiones son alguna vez sub- conadas por la base, con 5 ó 10 glándulas aguzadas y tsituadas inte- riormente en la parte mas inferior de la base, persistentes y algunas raras veces acrescientes; prefloracion quincuncial; corola monopé- tala hipojina, decidua, regular, tan pronto enrodada, como campa- nuda, infundibuliforme como hipocrateriforme y por fin algunas raras veces urceolada, de glándulas ó de apéndices situados hacia su seno é insertos mas ó menos alto en el interior del tubo ; preflo- racion valvar torcida raramente hacia la izquierda y ordinariamente por la derecha ; los estambres son 5, insertos en la parte mas infe- rior de la corola con cuyos lóbulos alternan, de filamentos formando un tubo que contiene el pistilo, raras veces libres; con anteras er- guidas é introrsas y de 4 celdillas incompletas, porque los tabiques que las separan son semi-completos, perpendiculares ó transversa- les; tales celdillas se hallan siempre prolongadas por fuera en Un apéndice cartilajinoso, cuyo ápice es simple ó trunco, otras veces están reunidas por un conectivo incrasado ó aguzado que se dilata en membrana delgada y blanca; polen hacia la adherencia de las DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVIll. — ASCLEPIADÍNEAS. 143 anteras en masas correspondientes á las celdillas, otras raras veces tales masas polínicas parecen confluyentes, mellizas ó solitarias, pegadas por medio de prolongamientos filiformes al estigma j res- pecto del cual se hallan liorizontales ó colgantes. Pistilo formado de un ovario único, pero compuesto por 2 carpelos aplicados el uno contra el otro por la sutura placentaria, uniloculares j con muchos huevecillos, regularmente dispuestos por series é imbricados, tan pronto ascendentes como colgantes, anátropos , lenticulares ó ver- miformes, algunas veces sub-peltados y provistos de una membrana celulosa, de micrópilo algo anchito y situado por su ápice; no hay disco ninguno; hay dos estilos, los cuales se hallan mas ó menos aproximados y conectos por el ápice que se termina por un estigma único, carnoso ordinariamente, pentágono y situado hacia los ángu- los de unos cuerpecitos lustrosos que alternan con las anteras, de- primido ó plano, con un pezoncito central bilobado, cónico ó pro- visto de un pico entero mas ó menos bíñdo ó coronado con 2 á 7 cerdas filiformes ; las mas veces se dilata hasta formar una especie de cúpula irregular y sinuosa. Fruto formado de 2 folículos, de los cuales uno suele abortar algunas veces, lisos, pelierizados ó con púas carnositas, apergaminados ó raras veces carnositos cuando ma- duros, con muchas semillas comprimidas, las mas veces provistas de una márjen, de testa lisa ó asperita, aleonada, opaca ó corcho- sita, frecuentemente provistas de cerdas situadas hacia el micrópilo carnosito y formando un penacho mas ó menos fornido y mirando hacia el vértice del folículo, raras veces hacia la base; con endos- permo delgado, carnoso ó córneo y opaco, de embrión recto, cuyos cotiledones son foliáceos y de raicilla corta, con la plúmula apenas notable. Análisis dicof árnica de las trihis y stib-íribus. 1. Filamentos de los estambres enteramente libres ó solamente por el vértice; masas polínicas 5 á 20, granulosas y cuyos granitos, en número de 4 por cada una, están dispuestos crucialmente ó por series ó solitarios, de ápice dilatado, plano ó con figura de cartucho cuaternadamente aplicados á los cuerpecillos lestigmáticos : anteras cuyo dorso raras veces tiene pelo; folículos muy divaricados. T. I. Periplóceas. — Filamentos de los estambres siempre cenados ó reunidos, 2. 2. Anteras 4 loculares y lampiñas, conteniendo 20 masas políni- cas, diminutas, erguidas y pegadas con los cuerpecitos asurcados y carnosos del estigma. T. II. SecAxMÓnieas. — Anteras siempre bi- loculares, 3. 3. Ordinariamente terminadas por una membrana, masas políni- cas 10, dispuestas por pares ascendentes y reunidas por medio de los prolongamientos estigmatices, erguidas y opacas ó raras veces transparentes por su parte superior ó lateralmente y casi opercula- das; yerbas carnosas ó frútices volubles. T. III. EstapélieaS,, 5. — Sin membrana terminal ninguna, 4. 144 DIMSION SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 4. Masas polínicas 10, apareadas, pegadas con los prolongamien- tos del e^tigína por el surco lonjitadinal que las hace parecer bipar- tidas, colgantes. T. IV. Asclepiádeas. B. 7. — Anteras de dehis- cencia transversal, conteniendo 10 masas polínicas apareadas y reunidas por medio de los prolongamientos del estigma, lonjitudinal- mente partidas por un surco, horizontales, bastantes veces transpa- rentes hacia el ápice ú ocultadas por debajo del estigma comprimido, pentágono ódispue^-to ó manera deestrella; yerbas viváceas ó frútices volubles. T. V. Gonolóbeas. D. 5. Masas polínicas enteramente opacas. S.-T. I. Perguláeieas. A. — Masas polínicas no enteramente opacas, 6. 6. Corona estaminal nula; tubo de la corola ordinariamente pe- ludo interiormente, con la garganta desnuda, ó algunas raras veces provista de 5 escamitas situadas por debajo de los senos. S.-T lí. Gymniímeas. — Masas polínicas con pelo situado hacia su ápice ó lateralmente. S.-T. III. CeropegteaS. A, — Pergulyrieas.G. I. — Marsdenia, R.Br. — Mata fruticosa abejucada superiormente, cuyas ramas tienen pelo dispuesto en dos series, de hojas lanceolado-oblongas, lanceoladas ó espatuladas, con una punta obtusita y aguzadas por la base, lampiñas y largas de 1" á2 1/2". Cimas cuyos pedúnculos son casi tan largos como los peciolos; lóbulos calizinales, orbiculares y pestañosos; corola larga de 2'", cortamente infundibuliforme, cuyas divisiones ovales son dos veces tan largas como el tubo, y barbuda por encima de la garganta ; hojitas de la corona carno^itas. J/. clausa^ R. Br. — M. afjinis,^\ch.. : C.T. V. 487. — Bejuco leñosolampiño, de hojasovales ó anchamente oval-oblongas, algo acorazonadas por la base y largas de 8 á 4" ; cimas umbeliformes, sub-sentadas ; divisiones calizina- les redondeaditas y pettañosas ; corola larga de 3'", enrodado- infundibiil'íbrme, cuyos lóbulos oval-oblongos son obtusos y pesta- ñosos, interior-mente lampiños y 3 veces mas largos que el tubo ; hojitas de la corona lanceoladas, estigma convexo y cónico á la par. M. macidata, Hook. 7. Corona estaminal nula, 8. — Siempre una corona estami- nal simple, doble ó triple, 9. 8. Garganta de la corola sin escamitas. S.-T. I. Astefáneas. — Garganta de la corola' provista de escamitas algo carnosas. S.-T. II. Micro LOME as. 9. Corona e&taminal simple, 10. — Corona estaminal doble ó tri- ple, 13. 10. Garganta de la corola desnuda, 12. — Garganta de la corola no desnuda, 11. 11. Hojuelas de la corona estaminal ó divisiones simples, enteras y esertas hacia la base del ginottejio. mas ó menos profundamente bífidas. S.-T. III. Haplostemmeas. — Corona estaminal adherida, con el tubo de la corola tubulosa, formada de 5 hojuelas simples y provistas interiormente de un dientecito; masas polínicas reunidas por un prolongamiento geniculado y algo anchito; corpúsculos es- tigmáticos lineares raras veces sostenidos por un cuernecito ó un pedicelo subulado; estigma elongado-dilatado por el ápice, trunco DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXVIII. — ASCLEPIADÍNEAS. 145 Ó mas frecuentemente 2-7-fido : yerbas vivaces sofruticosas ó fruti- cosas volubles. S.-T. IV. Oxypetáleas. 12. Las 5 hojuelas de la corona estaminal mas ó menos cóncavas ó con figura de cartucho, raras veces insertas en el vértice del gi- nostejio, pero ordinariamente por adentro de una lígula ó apéndice, son agudas ó desnudas, un poco engrosadas, y en ese caso de már- jen unidentada. S.-T. V. Euasclepiádeas. — Corona ciatiforme ó tubulosa, de boca sub-entera ó lobada. S.-T. VI. Cyxoctóneas. 13. Corona estaminal siempre doble, 14. — Corona estaminal doble ó triple, campanuda, cuyas hojuelas mas ó menos reunidas interiormente, opuestas ó alternas v terminadas en un apéndice linear, ciñen el ginostejio sésil ó estipitado. S.-T. VIL Eustegieas. 14. Corona frecuentemente, pero no siempre doble, cuya serie esterior es sinuado-lobada, mientras la interior es formada de 5 ho- juelas carnositas ó liguladas j mas ó menos redondamente túmidas. S.-T. VIII. Sarcostemmeas. — Sarcostemma Brownei, Miq. : C. T. V., 487. — Calotropis procera, R. Br. : C. T. V., 488. — Corona compuesta de hojuelas dispuestas en dos series, opuestas, lineares, iguales ó cuyas est eriores, ovales y agudas, tienen un dientecito diminuto situado por su parte interna ; frútices de ñores pequeñas cuyo interior está provisto de papillas blancas. S.-T. IX. Distar- se as. C. EuscLEPADiEAS. — AscLEPiAS, L. — Matado base fruticosa, cuyo tallo derecho, poco ramoso, se eleva como á una ó vara y media de alto, algo pubescente y rojizo, de hojas membranosas opues- tas, oblongo-lanceoladas ó lanceoladas, aguzadas por ambos estre- mos, pecioladas y alampiñadas; flores carmesí, de interior anaran- jado, dispuestas en especie de corimbo ó umbela terminal, cuyos pedicelos son largos de 3 á 4" y llevan una solitaria en el vértice ; divisiones de la corola elípticas y puntiagudas; columna ó ginoste- jio bruscamente estipitada; apéndices de los cartuchitos anaranja- dos, lanceolado-falcados, ovales, oblongos y cortamente esertos, folículos, oblongo-lanceolados y lisos, de semillas numerosas y con un penacho plumoso. A. Curasarica, L. : C. T. V., 394. — Mata de tallo derecho algo ramoso, sofruticoso inferiormente, que se eleva á 2 ó 3' de altura, cuando mas, nunca teñido de rojizo, pero verde bastante subido y pubescente, con hojas oblongo-lanceoladas, un poco mas dobles y mas grandes que las del anterior, mas pubescen- tes, algo undulosas por los bordes, de cara superior verde pálido, con manchitas verde-amarillentas, alampiñada, mientras la inferior, maspAlida, es pubescente ; flores blancas algo verduscas en umbelas estra-axilares ó terminales, de pedtínculos mas cortos que las hojas, cuyos pedicelos, largos de 2 á 3" y erguidos, son unifloros, con una bracteita pubescente situada en su inserción y muy decidua; divi- siones calizinales de color verde pálido y amarillento por la puntita moraduscay dobladas hacia abajo; corola blanca, de ló])ulos elípti- cos y obtusitos; apéndice de los cartuchos lineares falcados, blanco y teñido de color de rosa, ovales, oblongos y esertos ; folículos lan- ceolados y lisos. A. nivea, h. D. GoNOLOBEAS. GONOLOBUS, Much . — Mata fruticosa de tallo de- TOMO II 10 J46 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEROaAMOS. recho, alto de 3 á 5', de ramo? volubles, peludos, que llevan hojas ovaloblongas, acorazonadas, pecioladas, puntiagudas y largas de 4 á 2" \\2 : pedúnculos axilares, 4-5 floros ; flores en corimbitos pau- cífioros/de pedicelos delgaditos, cuyo cáliz lijeramente peludo, de lóbulos ovales y puntiagudos, es 1|3 ó 1(4 tan largo como la corola, que tiene 1'" áe diámetro, es 5-partida, li.ieranierite peluda y con divisiones lanceolado-acuminadas. Ordinariamente un solo folículo á causa del aborto del otro, del tamaño del puño, como fusiforme irregularmente con la parte media mas crecida, de vértice agudo y cuyo dorso está provisto de 3 alas,, de las cuales, 2 son laterales, y la de en medio situada en Ja sutura, membranoaas, van del vértice hasta la Imse y son anchas de 4 á 5'"; lampiño. G. o^ostratus, R. ^r.: Pag. 302. — Bejuco cuyos ramos peludos alampiñados llevan hojas anchamente acorazonadas, ovaloblongas por encima de la base, puntiagudas y largas de 4"; flores en corimbos ombeliformes axilares, pedunculados y de pedicelos delgados, cuyo cáliz de seg- mentos lanceolado-acuminados es lt3 ó \\^ tan largo como la corola 5-partida, cuyas divisiones lanceolado-aguzadas son glabras, co- rona corta lampiña undulosa sub-entera. G. Martinicensis, Dees. — Iratia mimcata, Gr.: C. T. V., 493. Familia 63. — APOCINFAS ó APOCINAC^AS. — VV^nias herbáceas ó matas fruticosas, de tallos volubles ordinariamente ó árboles mas ó menos grandes, arbustos y frútices, cuya savia es co- munmente lechosa : sin embargo, bastantes vejetalesde esa familia no la tienen así; de hojas simples com:Unmente enteras, opuestas, verticiladas y raras veces alternas, mas ó menos lanceoladas, co- riáceas y barnizadas, pecioladas y raras veces acompañadas de estí- pulas, que ettán con frecuencia reemplazadas por glándulas axilares solitarias ó amanojaditas; flores ordinariamente dispuestas en cimas y otras veces en racimos, regulares y hermosas, axilares ó termi- nales, algunas veces solitarias j alguna ve» apanojad as, formadas de un cáliz monosépalo &-lobo, ó con 5 ó raras veces 4 sépalos mas ó menos libres por la base y persistentes, de estivacion quincuncial, provisto de unas glándulas escamiformes situadas en la parte mas inferior de la base; corola monopétala infundibuliforme ó hipocra- tjeriforme, raras veces acampanada ó enrodada, de tubo ensanchado y velludo hacia el oríjen de los estambres- y cuya garganta está des- nuda ó adornada de 5 lacinias dispuestas á manera de corona, y que lleva un limbo 5-4 lobo, cuyas divisiones oblicuamente obovales tie- nen estivacion torcida ó imbricada. Estambres 5' y rarísimas veces 4, insertos en el tubo de la corola y alternos con los lóbulos, de fi- lamentos ordinariamente cortos y á veces nulos, libres ó rara vez un poco reunidos entre sí, terminados por anteras introrsas comun- mente inclusas, á veces esertas, frecuentemente asaetadas y cuyos lóbulos de la base adhieren y están pegados con el centro del estig- ma; polen granuloso, elipsoídeo y que se aplica inmediatamente al estigma; nectario carnoso que ciñe la base del ovario, formado de ' 5 glándulas alternas con los lóbulos calizinales, de la^ cuales una suele abortar y las que quedan se hallan cenadas en grupos de 2 ó 3, otras veces tres glándulas abortan y las dos exi&tentes alternan DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXVIII. — ASCLEPIADINEAS. 147 con los ovario!!>; por fin bastantes veces no hay nectario ninguno. Pifetilo formado de 2 ovarios súperos, libres ó reunidos entre sí en uno único uni ó bilocular, cuyo ángulo interno está ocupado por la placenta, cuja po>iicion es otras veces marjinal, ordinariamente con muclios huevecillos anfítropos ó casi anátropos; dos estilos reunidos en uno solo que sale del vértice de los ovarios terminado por un estigma CGva base e^tá dilatada en anillo ó en membrana, campa- nudo, glanduloso por el centro v de ápice bífido ó simple. Fruto tan pronto folicular como capsular, folicular-carnoso, como drupáceo ó abajado ; semillas ordinariamente colgantes ó mas raras veces as- cendentes , calvas ó cabelludas y algunas veces aladas, con un en- dospermo que suele faltar algunas veces; de embrión erguido cuya radícula es mas frecuentemente supera, y de cotiledones planos or- dinariamente V rarísimas veces convolutos. Análisis dicotórnica ele las trihus y sich-trihcs, 1. Ovario único, 2. — Dos ovarios distintos, 7. 2. Bilocular, 3. — Unilocular con dos placentas parietales que llevan muchos huevecillos anfítropos, semillas siempre calvas; cáliz sin glándulas. T. I.AYillugbeieas. 4. — 3. Bilocular y formado de dos ovarios mas ó menos reunidos por la base con óvulos anfítropos pegados en las ventallas ; fruto aba- yado ó drupáceo y á veces capsular, cuyas semillas son siempre cal- vas; cáliz ordinariamente sin glándulas. T. II. CarisseaS. 5. — Bi- locular cuyas semillas son cabelludas por la parte superior. T. III. Parsonsíeas. 4. De fruto capsular cuyas semillas son aladas por la márjen. — S. T. I. Allamandeas. Allamayida cathartica, Sieb.: C. T. V., 537. — Baya indehiscente , de semillas nunca aladas. S. T. II. WiLLTGHBEiEAS lejítimas. 5. Frutos capsulares cuyo disepimiento placentario gordo se se- para de las paredes á favor de la dehiscencia ó al abrirse la cápsula; semillas aladas por la márjen ; raicilla supera. — S.-T. I. Craspi- DOSPERMEAS. — De fruto abayado ó drupáceo, 6. 6. Baya ó drupa, las mas veces bilociilar, y algunas raras veces unilocular por causa de aborto durante la maduración, cuyas semi- llas no tienen ala ninguna; raicilla supera. S.-T. 11. Euoarisse.as,B. — Siempre una drupa bi-locular cuyas celdillas están divididas por un tabique falao, de semillas lateralmente aladas, raicilla escéntrica respecto del fruto horizontal y mirando hacia el ala. S.-T. III. — • Thevecieas. Thevetia nerií/oUa, Juss.: C. T. Y., 731. 7. De semillas calvas, 8. — De semillas siempre provistas de ucna cabellera, 10. 8. Ángulo interno de los ovarios ovulífero; muchos huevecillos anfítropos; frutos abayados drupáceos ó foliculares y mas ó menos carnosos ; conectivo no prolon.ííado por debajo de las celdillas de las anteras; corola torcida por la izquierda. T. IV. Plumerieas, 9. 9. Endospermo ruminado y provisto de una especie de costillitas 148 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓG-AMOS. Ó nervios formados por los pliegues del epispermo ; radícula infera. S.-T. I. Alixieas. — Endospermo carnudo nunca ruminado y que suele faltar alguna vez; raicilla infera; cáliz frecuentemente pro- visto de glándulas situadas por su interior y á veces con un nectario- óvulos pocos ó muchos; semillas con ó sin ala»; otras veces angulo- sas. S.-T. II. EuPLüMiERiEAS ó Tabeenemontaneas. a. 10. Por ambos estreñios; huevecillos anfítropos. T. V. Alsto- NiEAS. — Uno de los estremos solo provisto de cabellera, 11. 11 . Situada inferiormente ; cotiledones convolutos. T. VI. Wrgh- tlEAS. — Carnosas superiormente las semillas; óvulos anfítropos ó casi anátropos ; conectivo dilatado y prolongado por debajo de las celdillas de las anteras; cáliz 5-partido ; estigma indusiado ó pro- visto de un indusio; folículos elongados; hojas opuestas ó verticila- das ; ordinariamente bejucos. T. VIL Echiteas. C. A. Eüplumierieas. G. I. Plumieria, L. 1. Flores coloradas, 2. — Flores blancas, 3. 2. Flores cuyo color rojo es casi uniforme y saliendo antes de las hojas en umbelas terminales pedunculadas ; arbolito de unos 15' de alto, de tronco del tamaño del muslo, ramoso superiormente, de hojas oblongas ú oboval-oblongas, puntiagudas, lampiñas, peciola- dasy largas de 8-5", sobre 2 á 3" de ancho, de cara superior lustro- sa, mientras la inferior es un poco pubescente, cuyo peciolo lleva dos glándulas hacia la base; pedúnculos pubescentes bastante lar- gos, de pedicelos dicótomos y como articulados ; lóbulos calizinales sub-truncos ; corola de divisiones anchamente ovales y algo mas largas que el tubo algo encorvado y que lleva los estambres insertos hacia su base; folículos oblongos, corvados, acuminados y tuberculo- sos. P. rvJjra, L. : C. T. V., 427. — Flores coloradas pero con la mitad de la superficie de las divisiones de la corola mucho mas pá- lida que la otra y casi rosada : árbol del tamaño y aspecto general ó semblante del anterior, de hojas grandes, oblongas, acuminadas por ambos estremos, algo puntiagudas, lampiñas y largas de 8 á 12" sobre 3 á 4" de ancho, cuyo peciolo largo no tiene glándulas; flores en cimas glabras un poco contraidas, con pedúnculos largos de 6 á 8", pubescentes y algo rojizos; lóbulos calizinales redonditos, divi- siones de la corola oboval-ol)longas ú obovales, largas de 10 á 12'" y dos veces tan largas como el tubo que lleva los estambres insertos hacia su base; folículos como de 8" de largo, sobre 18'" de ancho. P. tenoHl Gasparr.: C. T. V., 427. ''3. Árbol cuvo tronco alcanza á 15" v mas de diámetro y se eleva bastante derecho como á 35' y mas de alto, ramoso superiormente, Con hojas espatulado-oblongas ú oblongas, ú oblongo-lineares, re- dondas ó mucronadas por el vértice, lampiñas, pecioladas y largas de 8 á 3" sobre 4 á 3" de ancho, de nervaduras oblicuamente trans- versas y reunidas por una redecilla no saliente; ñores en cimas lampiñas, contraidas, largamente pedunculadas, lóbulos calizinales redonditos ó mucronado-truncos ; divisiones de la corola largas de 10 á 12 ó 6 á 8'", espatulado-lineares ú oblongo-lineares, son ordi- nariamente mas largas que el tubo que lleva los estambres pegados por debajo de su parte media, folículos lineares aguzados conniven- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVITI. — ASCLEPIADÍNEAS. 149 tes por el ápice, como de T' de largo, sobre 6 á 8'" de ancho. P. ob- tusa, L. — Árbol algo mas pequeño que el anterior, de hojas bastante variables, oblongo-lineares ó lineares, redondas ó aguzadas por el vértice, de márjen como ribeteada j doblada hacia abajo ó roUadi- ta, de cara inferior tomentosa con las nervaduras rectángulamente transversas y reunidas por una redecilla algo pronunciada ; flores en cimas largamente pedunculadas y de pedicelos cortos y amano- jados unifloros, lóbulos calizinales anchamente redondos; divisiones de la corola largas de 8 á 12'" y obovales, son tan largas como el tubo que lleva los estambres pegados por encima de su base ; í'olicu- los lisos un poco obtusos, oblongos, un poco arqueados por su cara superior y parduscos. P. alba, L.: C. T. V., "785. G. II. Cameraria, L. —Árbol grande, de hojas elípticas, puntia- gudas, cuyas nervaduras acostilladas y aproximadas se reúnen en una arcada marjinal continua, largas de 1" 1{2, pecioladas ; tubo de la co- rola largo de 4'", con las divisiones del limbo casi tan largas como él; anteras oblongas tan largas como su apéndice; samaras larcas de 2" con el carpelo de 8'". C. latifolia, L. : C. T. V., 538. —Ar- busto de 8' de altura, algo mas ó menos, de hojas lanceoladas oblongo-lineares, obtusas, recortadas por el vértice, largas de 10 á 12'" sobre 4 á %'" de ancho, cortamente pecioladas, nervaduras de- licadas dispuestas en redecilla floja; tubo de la corola de 4'" y los lóbulos de %'" solamente de largo ; anteras ovales y algo mas cortas que su apéndice. C. angiostifolia, L. G.III. Tabern^montana, L. — Arbusto grande de hojas oblon- gas ú oblongo-lanceoladas, puntiagudas ó de punta obtusita, de base aguzada hasta confundirseconelpeciolo, largasde7-4", de nervaduras distantes y arqueadas; flores en cimas cortas, de pedúnculo apenas largo como el peciolo, blancas y de cáliz 5-partido, con lóbulos ova- les y obtusos , corola de limbo oval y puntiagudo en la yema, cuyas divisiones oblicuamente espatuladas son casi tan largas como el tubo de 4'" sub-cilíndrico y de vértice sub-campanudo; anteras de punta eserta; estigma 5-anguloso con indusio ancho ;• folículos ovales ú oblongo- cilindricos, encorvados, puntiagudos y acostillados. T. ci- trifoUa, Jacq. : C. T. V., "^SO. — Árbol muy alto y bastante corpu- lento, de hojas oblongas, undulosas, obtusitas, cortamente aguzadas hasta el peciolo, largas de 8 á 4" sobre 4á 2" de ancho, de nervadu- ras distantes, derechitas y reunidas hacia la márjen; cimas subsesi- les y con algunas flores de cáliz 5-partido con los lóbulos ovales ú oval -lanceolados y de ápice recorvado y obtusito ; corola de limbo oval-obtusito en la vema, con las divisiones oblicuamente obovales ú oboval-oblongas peludas hacia la garganta, undulosas y tan largas como el tubo de 4'", cilindrico por arriba de la base de ella. T. ^sy- chotriifolia, Kth. B.EucARissEAS. G.IV. Rauwolfia, L. — Arbolitode 15 á 20' de altura, ramoso, lampiño y de hojasapergaminadas opuestas ó verticila- das por á 4, elípticas o lanceolado-oblongas,largasde2 á 5" sobre 1" 1|2 de ancho, de cara superior lustrosa, con nervaduras delicadas por la cara inferior. Cimas formadas de algunas flores blancas de cáliz 5-fido con los lóbulos ovales y redondos á la par, una vez tan 150 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAAIOS. larg-o como el pedicelo j 1\3 ó 1|4 tan largo como el tubo cilindrico de ía corola barbuda por la garganta, cuyas divicsiones son tan lar- gas como el tubo, que lo es de 2-3'" : la punta del estigma sale mas allá del endusio ; drupa recortada, de carpelos semi-ovoídeo-redon- ditos y larga de 4"'. B. nítida, L.: C. T. Y., 809. —Arbusto de 3 á 8' de alto, ramoso, pubescente ó alampiñado, de hojas membranosas en verticilos de á 3 ó 4, eliptical-oblongas, puntiagudas, cortamente pecioladas, largas de 3 á 2", con vena^ delicadas y acostilladas; flo- res blancas teñidas de rosado en cimas paucífloras, de cáliz 5-fido, con lóbulos ovales, obtusos, la mitad tan largos como los pedicelos y como el tubo de la corola, que lo es de Y" 1|2 ; corola peluda de divisiones pequeñas redonditas 1{3 tan largas como el tubo; drupa redondeadita, cuyos carpelos están reunidos hacia el vértice, i?, ca- nescens, L. : C. T. Y.,809. C. EcHiTEAS. G. V. EcHiTES, L. — 1. Semillas cuyo vértice lleva una cabellera sentada en él, 2. — Semilla cuyo vértice se prolonga en un pico filiforme ó delgado, 6. 2. Tubo de la corola infundibuliforme por encima de la base, pe- ludo interiormente y por debajo de los e^^tambres, cuyas anteras obtusitas son acorazonadas por la base ; folículos reunidos hacia el vértice; bejuco de ramos pubescentes y con hojas oblongas, mucro- nadas de 5 á 2'' de largo, acorazonadas, de cara inferior pubescente ó casi lampiña y con nervaduras arqueadas ; flores en cimas espiga- ditas cuyos pedicelos alternos están escedidos por las biá<'teas lan- ceoladas; de cáliz cuyos lóbulos subulados son mucho mas cortos que la parte estrecha de la corola amarilla, cuyo tubo ensanchado desde en medio ó desde mas arriba es largo de 1" 1\2 á 2" ; anteras acora- zonadas, oblongas y glabras; folículos torrulosos. F. s7/mph]/tGcar- pa, Mey. — j5'. Brachystacliya y rugosa, Benth. — E. Tersicolor, J. MulL — E. tenuicaiilis, Stadelm.' — Tubo de la corola sub-ci- líndrico, raicilla tan larga como los cotiledones estrechos; arbusti- tos derechos ó trepadores y bejucos, 3. 3. Anteras oblongas obtusas y con una puntita inclinada, 4. — Anteras tiesas acuminadas por el ápice j aguzadas por la base ala- bardada ó acorazonada, 5. 4. De base con dos cuernecillos; planta sofruticulosa algo abeju- cada; lampiña, mas ó menos ramosa y de hojas óvalo-lanceoladas y acuminadas; flores amarillas en cimas corimbiformes, con pocos pedicelos mellizos, de cáliz cuyos segmentos glandulosos, desprovis- tos de escamitas interiormente, son óvalo-lanceolados, acuminados y 1x4 de la lonjitud del tubo de la corola cilindrico, bruscamente en- sanchado por en medio, largo de 6"' y como una mitad mas que los lóbulos, que lo son de 4'", anteras lampiñas : folículos torrulosos. E. torosa, Jacq.: C. T. Y., 495. — De base acorazonada ó sub-acorazo- nada; planta lampiña, de hojas oval-oblongas ú oblongo-lanceola- das, mucronadas y largas de 4 á2"; flores verdosas en cimas axila- res contraidas y mas cortas que las hojas, cuyos pedicelos son como apareados ó truncos, cáliz cuyos segmentos ovales, obtusos y pro- vistos interiormente de escamitas, son li6 de la lonjitud del tubo de a corola, cilindrico, bruscamente ensanchado mas arriba de la parte DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVIII. ASCLEPIADÍNEAS. 151 media y dos veces tan largo como los lóbulos obovales del limbo; anteras obtusitas de base sub-aeorazonada, oblongo-lanceoladas j lampiñas; tblículos cilindricos. F. trijida, Jacq. — Mesechites tri^ jida, J. Mili. 5. Flores rosadas, folículos torulosos; planta lampiña trepadora ó estendida por el suelo, con hojas lanceoladas ú oblongo-lanceola- das, aguzadas, simplemente aniueado-venosas, cuyos arcos están situados hacia la m^lrjen y son largas de 1" á 3" ; cimas paucífloras con pedicelos mellizos; segmentos caliiznales glandulosos y des- provistos de encamas óvalo-lanceolados, largos de V" , puntiagudos y 1{8 ó 1[10 de la lonjitud del tubo de la corola cilindrico, ensan- chado bruscamente arriba del medio v dos ó tres veces tan iarao como los lóbulos deltoídeos al revés; anteras aguzadas desde la base alabardada y lampiñas. E. o'e¡)ens, Jacq. — Flores verdoso-blan- quecinas; folículos comprimido-cilindricos; planta fruticulosa y glabra, de hojas ovales ú oval-redonditas, mucronadas, cuyas venas arqueadas son reticuladas. con las arcadas situadas cerca de la múr- jen, y largas de 1" 1(2 á 4"; cimas axilares umbeliformes y pedun- culadas ; segmentos calizinales glandulosos sin escamita interior, subulados, largos de V" 1|2 y 1[8 ó 1]_12 de la lonjitud del tubo de la corola que tiene 14'" á 18'", es cilindrico, ensanchado por debajo del medio y aguzado por arriba y tres veces mas largo que los es- tambres y tres ó cuatro veces tan largo como los lóbulos oblicua- mente obovales; disco 5-lobo ; anteras lampiñas, acuminadas desde la base alabardada, de apéndice y punta algo obtusitos. E . limlel- lata, Jacq. 6. Semillas terminadas en un pico largo lonjitudinalmente cabe- lludo por la base, cotiledones semi-cilíndricos y casi tan largos como la raicilla delgadita; arbustos sarmentosos ó trepadores, 7. — • Semillas terminadas por un pico largo y filiforme, lijeramente in- volutas por dentro de una escama placentaria ; anteras corneas, alabardadas con orejitas estrechas y obtusitas, aguzadas desde la base, contenidas en la parte mas baja de la porción campanuda de la corola ó provistas de un apéndice terminal largo y membranoso ; cotiledones lineares arrollados por la márjen y tan largos como la raicilla delgada; bejucos cuyo peciolo es articulado hacia la base, 8. •7. Bejuco leñoso muy largo, lampiño y muy ramoso, con hojas ovales ú ohoval-oblongas, obtusas, mucronaditas, con venas delica- das acostilladas y largas de 2'" 1(2 á 1'" 1[2; cimas pedunculadas 2- floras, á veces 3 ó l-flo*ras; segmentos calizinales fcin glándulas y sin escama interior, ovales, puntiagudos, 1|8 ó 1|5 de la lonjitud del tubo de la corola blanca que tiene 1" ll2y ellos 1" á 1'" 1|2 de largo y cuya parte campanuda es casi tan larga como la base cilindrica y como los lóbulos anchos; anteras oblongolanceoladas, obtusitas, de base redondo-acorazonada, y pelierizadas por la parte superior del dorso; folículos cilindricos. E . hijiora, Jacq.: C. T. V., 43. 8. Arbustillo ti^epador ó bejuco ramoso pubescente ó alampiñado, con hojas oval-oblongas ú oblongas, obtu^itas ú obtusas, y lai-gas de 2" lj2 á V 1|2 ; cimas coiimbifoirnes ; segmentos calizinales glandulosos, pero sin escama interior, lineares acuminados y tan 152 líIVISION SEGUNDA. FANERÓGAMOS. largos eomo la parte estrecha del tubo de la corola amarilla, cuya pane campanuda del tubo es tres veces mas larga que la base cilin- drica y algo mas que los lóbulos anchamente ovales; anteras sin apéndice termiiial y de dorso lijeramente peludo ó alampiñado; fo- lículos encorvados j estriados; semillas mucho mas largas que la parte desnuda de su pico. iT. Síiberecta, Jacq. C. T. V. 365-395. 9. Polícuios solitarios ó mellizos no carnositos cilindricos y pun- tiagudos, con manchitas purpúreas oblongas, largas de 4" y anchas de 15'" á 16''' : planta trepadora de ramos verrugosos que llevan ho-. jas oblongas, sub-aco razonadas ú obtuso-mucronea>> largas de 4"; lóbulos calizinales óvalo-agudos; corola 5-partida, de segmentos elípticos sub-agudos y abiertos ó estendidos ; semillas obovales aguzadas y comprimido-cóncavas, cuya cabellera es 4 veces mas larga que ellas. ^. maciilata. C. T. Y. 493. — Fruto elipsoídeo-carnoso, parecido á un limón elongado , áspero, giboso por acá y acullá y solitario, de color citrino; planta abejucada, glabra, cuyos ramos volubles llevan hojas anchamente acorazonadas, óvalo-elípticas, acorazonado -agudas, largas de 2" y anchas de 1". Flores purpúrea- estrelladas, de corola 5-fida con sus divisiones abiertas: hav un nec- tario doble en el fondo de la flor. E . citrÍ7ia, A. D. C: C. T. V. 494. Familia Q4.-~ GBNCIANFAS ó GENCIANACEAS.—V\d.n- tas herbáceas anuales, bisanuales ó vivaces, cuya raiz es algunas veces bastante gruesa y perpendicular, pero las mas veces fibrosa ; hojas simples, ordinariamente opuestas, á veces verticiladas, sésiles y envainadoras por la base, enteras y algunas veces dentaditas; lampiñas sin estípulas y frecuentemente palmatinervias ; flores siempre herm afro ditas, solitarias ó apanojadas, ó espigadas y ter- minales, las cuales constan de un cáliz monosépalo, persistente con 4 ó 5 divisiones mas ó menos profundas ; de una corola regular mo- nojpétala, ordinariamente marcescente, con 5 lobos, de estivacion torcida por la derecha y rarísimas veces induplicativa ó empizar- rada, campanuda ó infundibuliforme, cuyo tubo mas ó menos largo lleva 5 estambres inclusos, pegados en su interior y alternos con sus lóbulos. Pistilo formado de un ovario único, supero, fusiforme sentado sobre un disco hipójino, bilocular y con muchos huevecillos situados en dos placentas axiles_, cuyo vértice lleva un estilo á veces bipartido y que suele faltar alguna rara vez, terminado por un es- tigma entero ó bílobo. El fruto consiste en una cápsula con una ó con dos celdas formadas por el borde de las ventallas que penetra en el interior, de dehiscencia septícida, conteniendo muchas semillas pequeñas cuyo embrión recto se halla alojado en el centro de un en- dospermo carnudo. Análisis dicotómica de las tribus y suh-trihus. 1. Estivacion déla corola induplicativa; epidermis de la testa leñosa; vainas de las hojas radicales alternantes; yerbas acuáticas ó de los lugares anegadizos. T. I. Meniántheas. — Limnanthemum Humholdtianum, Gr. : C. T. V., 141. — Estivacion de la corola tor- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXVIII. ASCLEPIADÍNEAS. 153 cida por la derecha; testa membranosa; hojas opuestas enteras, en- tejérrimas j raras veces alternas; yerbas terrestres j rarísimas veces frútices. T. II. Eugenciáneas, 2. 2. Estilo persistente, 3. — Estilo siempre deciduo, 4. 3. Anteras provistas de un conectivo ; estilo distinto del estigma, doble ó simple. S.-T. I. Lisiánteas. — Anteras con conectivo; es- tigma persistente sentado ó llevado por un estilo persistente, cuyo vértice se confunde con los brazos estigmatíferos. S.-T. 11. Swer- TÍEAS. — Voyria unijlora, Lam. : C. T. V., 143. — Anteras con un conectivo, estilo distinto del estigma doble ó sencillo. S.-T. III. LlSIÁ.NTHEAS. A, 5. 4. Celdillas de las anteras erguidas y opuestas al conectivo, de- hiscentes por medio de una grieta lateral abreviada , poriformes, las mas veces contiguas por arriba. S.-T. IV. Chiróneas. — Fus- toma exaltata, Gr. : C. T. V.141. — Slevogtia occidentalis, Gr. : C. T. V. 142. 5. Anteras con un conectivo; estilo distinto, deciduo. S.-T. V. Chloráceas. — Anteras sin conectivo, 6. 6. Por fin callosa-recorvadas. S.-T. VI. Sabáttieas. — Torcidas en espiral. S.-T. VII. Erithreáceas. — Coutouhea densifiora, Mart. : C. T. V. 145-326. A.LiSANTHEAS, G. I. — LiSANTHUs, Aubl. — 1. Corola raarces- centede tubo contraído, sosteniendo un limbo frecuentemente oblicuo y abierto ; hojas de nervaduras arqueadas, 2. — Corola decidua, cuyo tubo va ensanchándose gradualmente y se transforma casi en el limbo; hojas de nervaduras arqueadas, 3. 2. Yerba anual, de tallo casi cilindrico y simple que se eleva á 3 ó 4' de altura y lleva hojas ovales ó elipticas, cuyas superiores son sésiles ; brazos de las cimas racimiformes con flores unilaterales, de cáliz 5-fido, con los lóbulos obtusos; corola verdusca ensanchada por la garganta, larga de 1", cuyas divisiones oblongas y obtusas son iguales con los estambres ó algo mas larguitas; lóbulos de la estigma obovales. L. clielonoides, L. 3. Planta herbácea anual cuyo tallo tetrágono por la parte supe- rior se eleva á 2 ó 4' de altura y lleva hojas elipticas, eliptical- obloncas, cuyas superiores son sentadas, frecuentemente óvalo- lanceoladas; brazos de las cimas flojos y arracimados; de flores ca- bizbajas con cáliz 5-filo de lóbulos redondos; corola blanca ó azul, larga casi de 1", de tubo comprimido por encima del cáliz y 4 veces tan largo como las divisiones redondeaditas ; estambres que no esce- den el limbo; divisiones del estigma oblongo-lineares ; cápsula ovoi- dea tres veces tan larga como el cáliz. L. uliginosus. Gr. G- U.Schultesia, Mart. — Yerba de hojas oblongas lanceoladas ó lineares; cimas dicótomas cuyas flores laterales están acompañadas de dos bracteitas que faltan á las del centro, cortamente pedicula- das, de cáliz con 4 alas transversal mente venosas, semi-ovales ó semi- lanceoladas; corola de color rosado moradusco 4-flda, cuyas divisio- nes son sub-truncas; filamentos con 2 dientecitos por la base. ;S'. stenophylla, Mart. — Planta herbácea cuyo tallo, largo de como 6", simple interiormente, lleva hojas lanceolado-lineares ; cimas uní ó 154 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. paucífloraíí, de flores acompañadas de dos bracteitas elong^clas, cu- jas centrales son subsesiles; de cáliz con 4 alas estrechas transver- salmente venosas, semi- lanceolado- lineares; corola grande, de r' 1/2 á 2" de largo, rosada y 4 divisiones ])rofundas ovales y mu- cronaditas; filamentos sentaditos ó subulados por la base. S. hete- rophyllay Miq. CLASE XXIX. — COXYOLYULÍXEAS. Familia 65. — CONVOLVULÁCEAS. — Plantas herbáceas anuales ó vivaces, de raices frecuentemente tuberculosas; otras ve- ces matas y raramente frútices, de tallos larguísimos ordinaria- mente delgados y volubles, mas ó menos ramosos y de savia lechosa. Hojas siempre simples, enteras, acorazonadas, dentadas, lobadas y hasta dijitadas, pecioladas, alternas y ordinariamente sin estípulas. Flores mas ó menos grandes, solitarias ó cimosas, ordinariamente axilares y á veces terminales y que constan de un cáliz de 5 sépalos ordinariamente distintos ó soldados por la base , algunas raras veces de 4 solamente, foliáceos, persistentes, acompañados frecuentemente de dos brácteas foliáceas situadas en su base, pero que suelen faltar bastantes veces; de una corola monopétala mas ó menos grande, in- fundibuli forme ordinariamente, cuyo limbo 5-lobo tiene aveces 5 ángulos mas ó menos puntiagudos, de prefloracion torcida; estam- bres 5 insertos en el tubo de la corola, desiguales, ordinariamente inclusos y alternos con sus divisiones, cuyas anteras biloculares y asaetadas son derechas. Pistilo formado de un ovario único, con dos carpelos reunidos, ó 2 á 4 separados, 1, 2, 3 ó 4-locular, con uno ó dos huevecilios erguidos en cada celda; e:^tilo único ó alguno.-, estilos con sus correspondientes estigmas, largo filiforme, cuyo estigma en cabecita ó globoso, es entero, bílobo ó hasta 4-lobo. El fruto es cap- sular ó algunas raras veces algo carnudo, 2, 3, 4-lociilar, con 1 ó 2 semillas erguidas en cada celda, casi huesosas, ombligadas por la base y pegadas por la base de una placenta central, la cápsula se abre por tantas ventallas cuantas celdas tiene, raras veces indehis- cente ; las semillas ordinariamente desnudas ó glabras y mas ó me- nos lisas están á veces cubiertas de pelo; con ó sin endospermo y de embrión con los cotiledones arrayados ó nulos, alojado en el centro del endospermo blando, cuando existe. Análisis dicotómica de las tribus y síih-tribus. 1. Embrión espiral sin endospermo y acotiledóneo ó sin cotiledo- nes, dos estilos distintos frecuentemente desiguales y estigma ca- bezudo ; un pixidio; plantas herbáceas afileas y parásitas. T. 1. Cus- CUTÁCEAS. A. — Embrión con ó sin endospermo y de cotiledones bien visibles y arrugados; vejetales con hojas y no parásitas, 2. 2. Endospermo nulo; ovario formado de 2 ó 4 carpelos separados y distintos; 2 estilos basilares; 2 ó 4 aquenios: semillas erguidas. T. II. DiCHÓNDREAS. — Cou Ó sin endospermo 3. 3. Endospermo carnudo ó nulo, fruto indehiseente. seco ó á veces DICOTILEDÓNEOS. — CLA:SE XXIX. CONVOLVULÍNEAS. 155 algo carnoso ; ovai'io 4-lociilar de celdas l-ovuladas , estigma cabe- zudo j bílobo ; bejucos. T. III. Argyrieas. — Endospermo espeso ó nulo; cíípsula dehiscente 1, 2. 3, 4-locular, con 2 ó con 1 hueveci- 11o en cada celda. T. lY. Convoltúleas. 4. 4. Ebtilo único. S.-T. I. EucoNTOLTüLEAS, 5. — Estilo dividido ó algunos estilos. S.-T. II. Etolyúleás, 6. 5. Ovario 1-locular ó cuando tiernecito bilocular. S.-T. III. Ga- LiSTEGÍEAS. — Ovario nunca uniiocular% 6. 6. Ovario 3 ó 4-locular. S.-T. IV. Bátate as. B. — Ovario bilocu- lar, 4 ó 6-ovulado. S.-T. V. Ipomceas. C. A. CuscÚTEAS. — CusciTA. L. — 1. Flores en raciraitos densos, escamitas de la corola inclusas, 2. — Flores anaanojadas, escamitas de la corola proeminentes, 3. 2. Flores verdoiíO- amarillentas cuyos pedicelos son mas cortos que ellas, de cáliz ventricoso, cuyos lóbulos son cortos y redondos, ape- nas escedidos por la corola campanuda, con 5 dientes redonditos, obtusos y erguidos, escamitas inclusas; cápsula globosa, irregular- mente circuncisible. C. Americana, C. T. V., 501. 3. Pedicelos ordinariamente mas largos que las flores, de cáliz anchamente campanudo, igual al tubo de la corola ó excediéndole, con lóbulos deltoídeos; corola enrodada 5-fida, de divisiones estre- chaniente lanceoladas v a2:udas, capsula globosa circuncisible O ir- regularmente ruptible. C. umbellata^ Kth. — Pedicelos casi tan largos como las flores, 4. 4. Tallo de color anaranjado; flores blancas de cáliz con lóbulos obtusamente deltoídeos y tan largos como el tubo de la corola cam- panudo-enro ladñ, frecuentemente provista de glándulas y cuyas di- visiones ovales y obtusas son casi tan largas como el tubo y reflejas; cápsula deprimido-globosa, eserta y abayadita. C. ohtusiJiora.líXh. — Cáliz de lóbulos deltoídeos y algo mas cortitos que el tubo de la corola espe>a y campanuda, cuyas divisiones deltoídeas, derechas ó abiertas están inclinadas por la punta aguda; cápsula cónica encer- rada en la corola y abayadita. C. indecora, Chois. — C. decora; Engelms. B. Batáteas. — G. 1. Batatas, Rumph. — 1 . Ovario bilocular por el vértice, semillas lampiñas, 2. — Ovario 4-locular por el vértice y bilocular por debajo de él, semillas velludas, 5. 2. Haiz tuberculífera m>as ó menos gruesa, de la cual salen tallos herbáceos entendidos por el suelo, con el vértice ó ramos ascenden- tes, ó derechiio'. mas ó menos largo, mas ó menos voluble, cuyas ramitas, son algunas veces pelierizaditas y llevan hojas acorazona- das, ondeado-enteras ó sinuadas, 3 ó 1-lobas, bastante grandes y pe- cioladas; flores ordinariamente rosadas O blancas mas ó menos teñi- das de color de ro^a, en cimas pedunculadas, ordinariamente pau- cífloras, axilares y cuyo pedúnculo es tan largo como el peciolo ó algo mas cortito, de cáliz con sépalos ovales u oblongo-mucronados, cuyos dos esteriores son mas cortos, y 1[5 ó 1|4 de la lonjitud de la corola larga de 2" ó de 1" 1(2; semillas lampiñasy con algunas líneas pubescentitas. B. edulis, Chois. : C. T. V., 200. — Variedades. 3. 3. Sépalos largamente pestañosos: ovario pelieiizado; hojas acó- 156 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. razonado-deltoídeas; repandas ó sinuosas; flores blancas; tubérculos de como 2 libras ó libra 1\2, maduros á los tres meses de sembrados, color como de púrpura ó moradusco esteriormente y de carne mas ó menos amarilla y á menudo con fragancia de rosa. B. porphyrorhi- 2,a. — Sépalos y ovario lampiños, 4. 4. El primer sépalo oval; hojas acorazonado-deltoídeas, ondeadas ó sinuadas por las orejitas; flores rosadas; tubérculos color de la- drillo esteriormente, y de carne verdoso- amarillenta. B. edulis, March. — El primer sépalo oblongo ; hojas 5, 7, 3- lobadas por arriba del medio, cuyos lóbulos oval-lanceolados, aguzados y diverjentes, tienen su parte media mas ancha; flores disciplinadas de blanco y de rosado ; tubérculos elongados blancos. B. leucorfliiza, March. 5. Plantas lampiñas de hojas palmatífidas, con 5, *7, ú 8 lóbulos oblongo -lanceolados, raramente ovales, enteros; flores rosadas en cimas pluri ó paucífloras, cuyos pedúnculos son mas largos que los /peciolos, de cáliz cuyos sépalos ovales, obtusos y cóncavos son casi ' 1|6 de laionjitud de la corola, qne tiene 2" ó 1'' 1¡2 de largo. Cáp- sula cuyas semillas están provistas de pelo algodonoso ó de lana, dispuesto por series ó terminal, con trechos lampiños entre ellas; raiz tubarífera. B. digitata, Chois. : C. T. V., 210. — Planta de ra- mitas pubescentes ó alampiñadas, que llevan hojas acorazonado- redordi.tas, enteras ó á veces sinuado-lobadas, de cara superior pu- besceíitita, mientras la inferior es tomentosa ; flores rosadas ó blancas, solitarias ó temadas en el vértice de un pedúnculo axilar, de cáliz cuyos sépaloslargos de 4'", ovales y obtusos, son l¡9ó 1|12 de la lon- jitud de la corola, que tiene 4 ó 3'' de largo ; semillas provistas de lana larga estendida á lo largo de la márjen; raiz tuberculosa. B. jalapa, Chois. : C. T. V., 533. G. II. Pharbitis, Chois. — Disco cupuliforme 1[2 ó 1|3 de la lon- jitud del ovario. 2. — Disco campanudo que encierra el ovario, 3. 2. Planta herbácea de ramos peludos ó alampiñados, con hojas acorazonado 3-lobas, cuyos lóbulos son deltoídeo-ovales y enteros; flores pocas ó 1 en el vértice del pedúnculo, de cáliz con sépalos lar- gos de 1", lanceolado-lineares, aplicados, pubescentitos ó alampiña- dos y frecuentemente pelierizado-pestañosos por la base, son 1^2 del tubo de la corola largo de 2", la cual es azul interiormente y se va ensanchando gradualmente por arriba de la base cilindrica, disco 1|2 de la lonjitud del ovario 3-locular, 6-ovulado. P. acuminata, Chois. 3. Vejetal lampiño, de tallo muy ramoso, con hojas acorazonado- trílobas ó mas rara vez acorazonado-redonditas, cuyos lóbulos ente- ros, ondeados, puntiagudos son lateralmente ovales, mientras el de en medio es oblongo; flores azuladas ó carmesí, ó con esos dos colores mezclados y matizándose, pocas ó 1 en el vértice de los pe- dúnculos ; de cáliz con sépalos largos de 8 á 10'", ovalo-lanceolados, largamente aguzados, sub-derechos, lampiños y 1|2 del tubo de la corola largo de 8á 10'", la cual va ensanchándose gradualmente des- de la base ; ovario con tres celdas y 6 huesecillos. P. cathartica, Chois. -. C. T. V. 535. C. Ipomceas. — G. I. Ipomcea, L. — 1. Sépalos membranosos y DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXIX. CONVOLVULÍNEAS. 151 por Último coriáceos, 3. — Sépalos grandes y escariosos j por último cartilajinosos; corola grande, infundibuliforme ó campanuda, de tubo ancho y dilatado desde la base; anteras inclusas y por fin sub- torcidas ; ovario bilocular 4-ovulado, sin disco cupuliforme ; cápsula reventándose transversalmente hacia el medio, 2. 2. Tallo pubescente ó alampiñado, con hojas acorazonado-redon- ditas, mucronado-apiculadas, pedúnculos pauci ó 1-ñoros y por úl- timo vueltos espesos y acompañados de brácteas oblongas y deci- duas; flores amarillento-blancuzcas, de cáliz con sépalos ovales redondos y 1/3 ó 1/4 de la lonjitud de la corola, larga de 2" 1/2 á 3", infundibuliforme y cuyo tubo es campanado, los cuales al fin llegan á 3" de largo; cápsula globosa, grande de como 1" de diáme- tro, delgadita arriba de la parte media y encerrada por los sépalos acrescentes y conniventes; semillas diminutamente pubescentitas. J. ventricosa, Chois. — Convolvíilus ventricosus , Bert. — C. gran- dijlorus, Jacq. — Enredadera muy larga que trepa á una altura bas- tante grande por encima de los vejetales inmediatos á ella, lampiña, saliendo de un tubérculo del tamaño de la cabeza y no comestible, de hojas palmatífidas, cuyos lóbulos "7 elíptico-lanceolados y puntia- gudos, son enteros y salen de una base de 6 á 8'" de diámetro; flo- res amarillas pocas en el vértice de un pedúnculo que por fin se vuelve espeso superiormente, de cáliz con sépalos ovales redondos 1/2 de la lonjitud de la corola campanudo-infundibuliforme y larga de á2" ; cápsula globosa grande y de 1" lj2 á 2" de diámetro, aper- gaminada y envuelta por los sépalos crecidos y conniventes : semi- llas pubescentes. ./. tuberosa, L. : C. T. V. 534. 3. Ovario pegado sobre un disco cupuliforme ó anular, 10. — Ovario sin disco ninguno, 4. 4. Con dos celdas y 4 huevecillos; corola grande hipocraterifor- me y de tubo cilindrico; cápsula reventándose por la base y abrién- dose superiormente en valvas irregulares, 5. — Con 2 celdas ó con 4 por el vértice solamente y conteniendo 4 huevecillos ; corola or- dinariamente grande, campanudo-infundibuliforme; anteras inclu- sas; cápsula abriéndose en 2 ó 4 ventallas por la base, 6. 5. Enredadera de tallos muy largos y lampiños con hojas gran- des acorazonado-redondas, con una punta, enteras ó sinuoso-denta- das hacia las orejitas, aveces trílobas; flores blancas de olor muy suave 1 á 3 en el vértice de los pedúnculos apenas largos como el peciolo, de cáliz con sépalos desiguales, cuyos dos interiores ovales y oblongos son obtusos, mientras los 3 esteriores, óvalo-lanceolados, se terminan por un apéndice filiforme, 1[4 1|5 de la lonjitud del tubo de la corola, largo de 3 á 4" y ancho de 3'" ó 2'", la cual tiene el limbo abierto y ancho de 4" á 5" de diámetro; estambres corta- mente esertos ; cápsula oblonga con semillas lampiñas. /. Bona- nox, L. C. T. V. 684. 6. Semillas no algodonosas, tallos ordinariamente rastreros, 7. — Semillas algodonosas, tallos volubles ó trepadores, 9, 7. Hojas provistas de dos glándulas por la base; yerba lampiña de hojas lineai^-oblongas, acorazonadas ó redondas por la base, en- teras ú ondeadas ; pedúnculos unifloros casi tan largos como los pe- 158 DIVISIÓN SEGUNETA. FANERÓGAMOS. ciólos, de cuya axila salen; flores blancas, de cáliz con sépalos oval- oblongos mucronadito-obtusos, cuyos dos esteriores son algo mas cortos que los demás, 1[4 ó 1[5 de la lonjitud de la corola, termi- nándose gradualmente en punta por la base. J. acetosifoUa, R. S. : C. T. V. 508. 8. verba rastrera lampiña cuyo tallo larguísimo y delgado al- canza á mas de 100' de largo, no muy ramojo, lleva hojas redondi- tas, recortadas, acuñadas ó truncas por la base glandulosa y con venas pinadas ; pedúnculos comunmente casi tan largos como los peciolos con pocas flores purpúreas , de cáliz con sépalos oval- oblongos, obtusos mucronados y cuyos mas largos tienen h'" y los 2 mas cortos y esteriores 4'" de largo, y son Ip de la corola larga de 2" y aguzándose gradualmente hasta la base ; ovario con un disco anular, cápsula bilocular con semillas aleonado -pubescentes. /. 'pescaprm, Sw. — J. maritima, R. Br. — Canvolvulus 'pescaprcB, L. — Yerba rastrera de tallos bastante largos y ramosos, lampiñas y de hojas arriñonadas, acorazonadas o sub-truncas por la base glan- dulosa, cuyas nervaduras inferiores son palmadas; pedúnculos casi tan largos como los peciolos y con pocas flores robadas, de cáliz con sépalos mucronaditos, cuyos tres interiores son oblongos y obtusos, mientras los dos esteriores, redonditos, son la mitad tan largos; los mas largos 1[6 ó 1[8 de la corola, que se va estrechando gradual- mente hasta la base y es larga de 3"; cápsula bilocular de semillas lijeramente pubescentes. /. asarifolia, R. S. — /. iihica, Chois. : C. T. V.509. 9. Planta lampiña de tallo sofruticoso y trepador, cuyos ramos llevan hojas -3, 5, 7-partidas de divisiones elípticas ó eliptical- oblongas, apendiculadas, pecioladas, enteras ú ondeadas y de ta- maño muy variable; cimas flojas, pedunculadas, dicótomas y for- madas de algunas flores blancas ó purpúreas, ó una sola, de cáliz con sépalos redondos, cuyos 3 interiores, redonditos, son li6 ó l^^ de la lonjitud de la corola larga de 3" ó 2" y lijeramente ventricosa por arriba de la base, mientras los dos esteriores, oval-redonditos, son un poco mas cortos y de 4'" solamente los otros, teniendo b'" de largo; cápsula bilocular globosa escediendo al cáliz aplicado á ella, con semillas velludas largamente lanudas por la márjen, y cuya lana color de moho e^^tá estendida á manera de franja. /. macrorrliizay R. S.: C.T.V. 534. 10. Disco anular y corto, corola tubulosa é hipocrateri forme y de tubo cilindrico; anteras esertas durante la espansion del limbo ; ovario con 4 huevecillos, bi ó 4-locular por el vértice; cápsula abriéndose por 4 y rara vez 6 ventallas, 11. — Disco siempre cupu- liforme. mas ó menos grande, 12. 11. Planta lampiña cuyo tallo sale de una raíz provista de tubér- culos pequeños comestibles y lleva hojas acorazonado-aguzadas, en- teras ú ondeadas ; cimas formadas de algunas flores carmesí , de cáliz con sépalos oval-redonditos ó redondos, coloridos cuyos dos esteriores son mas cortitos, todos 1{4 ó 1[6 de la lonjitud de la co- rola, cuyo tubo es casi 4 veces tan largo como el limbo 5-partido, con las divisiones oblongo-lanceroladas; semillas lampiñas en las DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXIX. — CONVOLVULÍNEAS. 159 caras, mientras la márjen es ribeteada ó franjeada. /. repanda^ Jacq. — E xo-gonium o'epandumy Chois. 12. Ovario 2-4-locular con 4 huevecillos; corola blanca campa- nudo-infundibuliforme; anteras inclusas y por último recorvadas y torcilas á la par; cápsula abriéndose á favor de ventallas irregula- res, 13. — Ovario con dos celdas solamente ó con 4 por el vértice, 16. 13. Ovario con dos celdas, cuyos tabiques por fín son apenas no- tables, 14. — Ovario con 4 celdas de tabiques persistentes, 1.5. 14. Planta herbácea de tallos bastante grandes y muy ramosos, trepadora, peluda, de hojas profundamente palmatiíidas, con 5-7 segmentos elíptico- lanceolados, pinatíñdos ó sinuoso-dentados, alampiñados; estrujadas huelen á almendras amargas; flores blan- cas solitarias ó 2 en el vértice del pedúnculo axilar, de cáliz con sé- palos lampiños, oblongos, obtusitos, largos de 8'" á 10'", conniven- tes al rededor de la cápsula, mas largos que la mitad de la corola que tiene \" 1^2 de largo; ovario bilocular; semillas lampiñas. /. dissecta, Pursh. : C. T. V., 686. 15. Planta trepadora de ramos peludos que llevan hojas 5-parti- das de lóbulos elípticos ó lanceolado-elípticos, con una puntita, enteros; flores blancas en cimas flojas y pedunculadas, de cáliz con sépalos oval-oblongos, obtusitos, desiguales, cuyos 3 esteriores de 8'" á 10'", son mas largos que los demás, y densamente pelierizados inferiormente, mas largos que la mitad de la corola que tiene 15'" de lonjitud, y conniventes al rededor déla cápsula 4-locular y con- teniendo semillas lampiñas. ./. pentaphylla, Jacq. — Convolvulus pentaj)liyllus, L. — Batatas pentai^liylla, Chois. 16. Solamente dos celdas y 4 huevecillos: corola obcónica, cilin- drica por arriba del cáliz y por fin de base ovoidea; anteras sub- inclusas y por último algo torcidas; cápsula abriéndose á favor de 4 ventallas iguales. Enredadera lampiña ó pubescentita, de tallos bastante largos y ramosos, que llevan hojas acorazonado-deltoídeas, bastante variables y aguzadas, no muy grandes; flores amarillas en cimas umbeliformes, pauci ó plurífloras y pedunculadas, cuyos pe- dúnculos son ordinariamente mas largos que los peciolos, de cáliz con sépalos ovales, obtusos, sub-iguales, connivente-empizarrados, y largo de 3 á 4'", 1[3 ó 1[4 de la lonjitud de la corola, que tiene de largo 1"; cápsula sub -globosa con 4 semillas bruno-aterciopeladas, y cortamente velludas por la márjen. /. í(,mhellata, Mey. : C. T. V. 636. G. 11. Quamoclit vulgaris, Chois. : C. T. Y. 462. G. III. Convolvulus, L. — 1. Estigmas en forma de maceta y oblongos á la vez; ovario sin disco cupulifonxie, 2. — Estigma fili- forme, ovario pegado en un disco cupuliforme, 5. 2. — Flores en cimas contraidas y pedunculadas, 3. — Flores amanojadas, pediceladas y de pedúnculo corto ó nulo, 4. 3. Planta herbácea voluble, lampiña ó rara vez pubescente , de hojas acorazonado- ovales con una punta, enteras ú ondeadas; flores violáceas en cimas pedunculadas y bracteadas, de cáliz herbáceo, mitad de la lonjitud de la corola, peludo ó alampiñado, sin cerdas y cuyos 3-2 sépaios esteriores mas largos son ovales y con una punta, 160 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. mientras los 2-3 interiores óvalo-lanceolado, son aguzados; cápsula con 4 ventallas y de semillas lampiñas. C. 'pentanthus , Jacq. — C . rAolaceits, V. 4. Yerba voluble y alampiñada, de hojas lanceolado-lineares ú oblongo-lanceoladas, obtusamente mucronadas, enteras, cortamente pecioladas ; pedúnculo ordinariamente escediendo el peciolo lleva flores pediceldas j amanojadas, blancas ó purpúreo-pálidas, de cáliz con sépalos pequeños, membranosos, li4 de lalonjitud de la corola. y con una punta, cuyos esteriores son óvalo-lanceolados, mientras los tres interiores son redonditos; limbo de la corola larg-o de 6"', quinquefido; cápsula con 4-8 ventallas, de semillas enteramente ás- peras y con una ala estrecha por la márjen. C. Jamaicensis^ Jacq. 5. Planta herbácea pubescente ó tomentosa, de hojas ovales, mu- cronadas, ondeadas ó enteras; flores blancas amanojadas, pedicela- das en el vértice de un pedúnculo corto, de cáliz con sépalos peque- ños, membranosos, oval-redonditos y obtusos, sub-iguales, ly6 de la corola larga de 6'" y de limbo ondeado, cápsula con 4-8 valvas, cu- yas semillas lampiñas y asperitas están provistas de una ala marji- nal. estrecha. C . nodijlorus, Desc. CLASE XXX. —ASPERIFOLIAS. Familia 66. — BORRAJ 1NEA8. — Plantas herbáceas anua- les, bisanuales y vivaces, matas, frútices, arbustos, arbolillos y hasta árboles bastante grandes, de hojas simples, enteras, mas ó me- nos pecioladas, á veces sentadas, ordinariamente pelitiesas, ásperas y alternas. Flores siempre hermafroditas en grupos axilares, en es- pigas ó en panojas terminales ordinariamente con los brazos de pre- floracion escorpioídea ó de vértice rollado á manera de báculo de obispo antes de la floración, compuestas de un cáliz monosépalo per- sistente, con 5 divisiones mas ó menos profundas é iguales, casi siempre pelierizadas, ó peludas y ásperas ; corola monopétala ordi- nariamente regular, con 5 lóbulos mas ó menos profundos, de figura ó forma muy variada, de tal suerte que es tan pronto enrodada ó hipocrateriforme como infundibuliforme ó campanuda, cuyo tubo mas ó menos corto , lleva 5 estambres , mientras que su garganta es tan pronto desnuda como adornada de 5 apéndices de forma variada, abovedados', huecos, con una abertura situada en la parte interna de la base y alternos con los estambres. Pistilo formado de un ovario supero, simple ó compuesto de 4 lobos, ó 4 ovarios distintos unilocu- lares monospermos de huevecillo colgante, con un estilo simple gi- nobósico, terminado por un estigma entero ó lobado; en caso de ser sencillo el ovario, el estilo sale de su vértice, es entero ó mas ó me- nos partido. El fruto consiste en un tetraquenio contenido en el cá- liz, otras veces es una especie de drupa mas ó menos abayada, 4-lo- cular monosperma, cuyo hueso es frecuentemente unilocular por causa de aborto; semillas de embrión inverso con la raicilla supera, alojado en un endospermo carnoso delgado que ordinariamente suele faltar. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXX. — ASPERIFÓLEAS. 161 Análisis dicotómica de las trihis y suh-trihus. 1. Fruto carnoso, abajado ó drupáceo, 2. — Fruto seco indehis- cente aqueniforme, 3. 2. Embrión de cotiledones lonjitudinalmente plegados j sin en- dospermo ; árboles, arbustos ó frútices de pistilo formado de un ovario 4-locular indiviso, cuyo estilo terminal es ordinariamente doí, veces bifurcado ó dicótomo por el vértice y por consiguiente con 4 estigmas, raras veces nulo. Huesecito de los frutos de 4 celdillas monospermas. T. I. Cordiaceas. A. — Embrión de cotiledones planos y con endospermo tenue y carnoso ; arbustos, matas, frútices y raras veces yerbas de ovario ordinariamente indiviso ó raras veces lobado, plurilocular ó mas bien 4-locular, con adición de cavernas. Estilo comunmente bílobo por el vértice y raras veces simple; fruto abayado, con muy poca carne y 4 huesecitos. T. 11. Ehretíeas. B, 3. Ovario formado de dos carpillos indivisos, 4. — Ovario com- puesto de algunos carpillos y con estilo terminal simple; fruto par- tibie de semillas con endospermo escaso ó sin él; matas ó plantas herbáceas anuales. T. III. Heltotropíeas. C. 4. Pegados al estilo y uniloculares, semillas sin endospermo, plantas siempre herbáceas. T. IV. Roquelíeas. — Biloculares y frecuentemente partidos en 2 nuececillas uniloculares; el estilo sim- ple ó bífido sale de la base del ginobasio entre los segmentos del ovario; fruto rarísimas veces algo carnosito ; bi ó cuadripartible mas frecuentemente, con los segmentos ó aquenios dispermos en el primer caso y monospermos en el segundo; semillas sin endosper- mo ; plantas ordinariamente herbáceas y raras veces frútices ó ar- bustos. T. V. Rorageas, 5. ' 5. Garganta de la corola desnuda, 7. — Garganta de la corola provista de 5 apéndices abovedados, 6. 6. Situados en frente de los lóbulos de la corola y por consiguiente alternos con los estambres : 4 núculos por fin circuncisos por arriba de la base y por consiguiente agujereados. S.-T. I. x^nchuseas: — Borrayo ojfidnalis , L.: C. T. V. 632. — 4 núculos siempre cerrados por la base. S.-T. II. Cynogloseas. 7. Corola siempre regular, 8. — Corola mas ó menos irregular; 4 núculos cerrados por la base. S.-T. III. Echie.is. 8. 4 núculos, 9. — 2 carpillos biloculares. S.-T. IV. Cerinteas. 9. Cerrados por la base. S.-T. V. Litospermeas. — Circuncisos por arriba de la base y por consiguiente agujereados. S.-T. VI. Craniospermeas. A. Cordiaceas. Cordia, L. I. Cáliz con surcos, 2. — Cáliz no asurcado, 7. 2. En número de lOy 3 ó 5 dentado ; corola marcescente torcida por la derecha con la márjen interior plegada, 3. — En número de 10 á 12 é irregularmente circuncisible por debajo del ápice cerrado ; corola plegada y empizarrada á la par, decidua, 4. 3. Arbusto ó árbol que se eleva á 15 ó 25' de altura, poco corpu- 162 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. lento y muy ramoso, de hojas oblongo-lanceoladas ú oval-oblongas, enteras, lampiñas y largas de 3" á 8" ; panojas pluriñoras cuyas úl- timas flores son amanojado-agrupadas ; de cáliz largo de 4 á b"', campanudo, cilíndrico-pubescente, pelierizado ó herrumbroso-pu- bescente ó alarapiñado, con 3-5 dientes desiguales y deltoídeos ; corola blanca infundibuliforme, larga de 8"' á 10'", quinquefida, pe- queña por debajo de la parte eserta de su tubo y cuyos lóbulos obo- vales y sub-retusos son largos de 3 á 4'" ; estambres cortamente esertos é insertos por debajo del medio del tubo de la corola. C. Ge- rascaiitoides, Klh. : C. T. V., 255. — Árbol de unos 30' de altura, poco corpulento y ramoso, con pelito finito y á veces dispuesto á manera de estrella, de hojas oblongo-lanceoladas ó elíptico-oblongas, con una punta entera alampiñada ó estrellad o-pubescente por la cara inferior ; panojas estendidas, cuyas últimas flores son agrupa- das, de cáliz claviforme y cilindrico, peludo tomentoso con pelo es- trellado, cuyos 5 dientes pequeños son iguales y largo de 2'" á4"'; corola blanca hipocrateriforme de limbo 5-fido tan largo como el tubo, cuyos lóbulos espatulado-oblongos son largos de V" Ifl á 3'"'; estambres largamente esertos é insertos cerca de la garganta. C. GerascautMis, Jacq.: C. T. V., 255. 4. Drupa nunca acompañada por la base persistente del cáliz, 5. — Drupa acompañada siempre por la base persistente del cáliz, 6. 5. Árbol de 30 á45', bastante corpulento, áspero y alampiñado, con hojas elíptico-redonditas, dentado-repandas, de color uniforme y largas de 2 á 4"; panojas corimbiformes cuyas últimas flores son subsesiles, de corola blanca, infundibuliforme, cortamente 5-loba, tres veces mas larga que el cáliz turbinado y de 6'" con los lóbulos recortado-redonditos; drupa blanca, elipsoídea y larga de 5"" á 8"'. C. aUa, Rs.: C. T. V., 633. 6. Arbusto como de 8 á 12' de altura, áspero y con hojas ovales, sub-enteras y largas de 5 á 8"", cimas corimbiformes de flores pedi- celadas con el cáliz cilindrico herrumbroso-áspero, desigualmente 3, 5-dentado, casi mitad de la lonjitud del tubo cilindrico de la co- rola encarnado-oscura, hipocrateriforme, cuyo limbo 6 y á veces 5, 8-fldo tiene 1'" á 2'" de diámetro y con los lóbulos óvalo-redonditos; rupa blanca oval-sub-globosa, con una punta obtusa y de 8 á 12^'' de diámetro. C. sehestana, Jacq.: C. T. Y., 426. — Ovario sub-esti- pitado ; drupa blanca, semi-transparente oval-ceñida por la base persistente del cáliz, con una sola sem.illa por causa del aborto de las otras. Arbolito de 15 á 20' de altura, con muchos ramos alter- nos cilindricos, blanquecinos y lampiños, cuyas ramitas cargan con hojas óvalo -elípticas, agudas por ambos estremos, dentaditas, membranosas, reticulado-venosas, largas de 2 á 3", de cara superior glabra y áspera, mientras la inferior es pubescente; peciolo largo de 1|2" y algo cilindrico, apenas pubescente y verrugoso ; flores blancas en corimbos terminales de brazos dicótomos y de pedúnculos estriad o- pubescentes, desparramados, con las flores agrupadas y sésiles, tie- nen como 3'" de diámetro; cáliz campanudo, estriado-asurcado, pu- bescente y con 4 dientecitos obtusitos; corola infundibuliforme de limbo 5-fido y abierto, con la garganta peluda, su tubo es tan largo DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXX. — ASPEEIFÓLEAS. 163 como el cáliz ; estambres apenas esertos. — C. clentata, Kth.: C. T. y., 4^6. 7. Cáliz liso, reventándose por el ápice cerrado, ensanchado y frecuentemente espeso en derredor de la drupa: corola grande, em- pizarrada Y decidua con el tubo eserto, 8. — Cáliz no liso y reven- tándose por el ápice cerrado ó regularmente 4, 5-dentado ; corola empizarrada y decidua, cuyo tubo iguala ordinariamente el cáliz, 9. 8. Flores en cimas ó en panojas corimbií'ormes, 8. — Flores dis- puestas en grupos, espigas y cabezas, 10. 9. Arbolito ó arbusto que se eleva de 15 á 25' de altura, con las hojas obo val-oblongas ó elípticas, ondeado-enteras, de cara superior lampiña y lu;^trosa, mientras la inferior es pubescentita, membra- nosas y por fin coriáceas, deciduas al aparecer las flores, ordinaria- mente aguzadas por la base y largas de 2 á 6"; cimas acorimbadas herumbroso-pubescentes, con flores subsesiles y cortamente pedicela • das por la base contraída del cáliz globoso, pubescente, liso y por fin 3, 5-dentado y largo de 1 ó V" 1|2 ; corola blanca cuyos lóbulos elípticos casi tan largos como el tubo son relejos ; drupa encamado- globosa y de 3 á ^" de diámetro. C. collococca, L. C. T. Y., 803. 10. Arbusto de 6 á 10' de altura, pelierizado y ramoso, de hojas ovales ú oval- lanceoladas, obtusitas, aserradas y cuyos dientes son obtusos y largos de 1 á 2'" : flores blancas en cabezas globosas pe- dunculadas, de cáliz 5-fido con lóbulos subulado-filifomies, fiexuo- sos, pelierizados y tan largos como el tubo estrigoso de la corola in- fundibuliforme, largo de 2'" y dos veces mas que el cáliz con los lóbulos muy cortos; drupa oval-obtusa, colorada, larga de 2'" y cor- tamente eserta. C. glohosa, Kth. — C . hullata, De. — Varronia glo- bosa, L. — V. lullata, Sw. — F. humilis, Jacq. B. Eheetíeas. G.I.Beureekia, P. Br. 1. Estambres insertos por debajo de la garganta de la corola; drupa globosa ú ovoidea, con 4 huesecitos ó pirenas que se separan bastante tarde y sin ningún earpóforo distinto, 2. — Estambres insertos en la parte mas inferior del tubo de la corola, pelierizado por debajo de ellos ; fruto seco for- mado de 4 nuececitas que se separan del earpóforo bipartido y fili- forme, 3. 2. Árbol pequeño ó arbusto de 5 á 15' de altura, lampiño con ho- jas oboval-o'blongas, oblongas ú oboval-redonditas, pecioladas y lar- gas de 2 á 5" ; flores en cimas estendidas, ordinariamente apanoja- das ; tubo de la corola largo de 3'" y tanto como los lóbulos obovales y algo mas que el cáliz lampiño, que tiene 2 á 3'" de largo ; drupa amarilla, globosa ó por fin obtusamente 4- angulosa, 2 ó 3 veces mas larga que el cáliz y con 3 á 6'" de diámetro. B. S2icculcnta, Jacq. — £! . I?oí(rreria, L. 3. Arbolito como de unos 15' de altura, cuyas ramitas pelieriza- ditas llevan hojas elípticas ó lanceolado-oblongas, puntiagudas ú obtusitas, aguzándose hasta volverse peciolo corto, lampiñas ó alam- piñadas, con las nervaduras arqueadas y largas de 3 á 2" ; flores en cimas corimbifonnes , pelierizaditas, de cáliz pubescentilo, mucro- na.do en la yema y por fin 2. 3-dentado, tubo de la corola de 8'" y dos veces tan largo como los lóbulos oval-i-edonditos y como el cá- 164 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. liz; fruto subulado piramidal largo j ancho de 6'" de huesecitos, esponjosos y cóncavos por el dorso. B. exsucca. Jacq. — Bhretia exsíicca, L. G.II.TouRNEFORTiA, L. 1. Drupa seca, ahuecada por la base, entera por el ápice y con dos huesecitos cuyo tabique de cada uno es sólido: semillas con endospermo de embrión recto, 2. — Drupa no seca y mas ó menos carnosa, 3. 2. Arbusto alto de 2 á 6', enteramente sedoso-tomentoso y con muclias hojas espatulado-lineares, obtusas, sésiles y largas de 1'^ 1|2 á 2" lí2; flores blancas en espigas cortas formando corimbos con pocos brazos: tubo de la corola velludo, cuyos lóbulos son ovales y obtusos; drupa ovoídeo-cónica. T. gyuíjphaloides, E. Br. — Helio- tropmm gnaphaloicles, Jacq. 3. Drupa entera con dos huesecitos Iñloculares, campilospermos por causa de los tabiques ahuecados ; embrión recto, 4. — Drupa con 4 huesecitos ó raras veces 1 solo, dividido en algunos lóbulos mo- nospermos ; embrión encorvado : anteras coniventes con la punta coherente; drupas cortamente pediceladas y apartaditas, 5. 4. Arbusto abejucado ó samentoso algo trepador pelierizado ó pe- lierizadito, muy ramoso, de hojas elípticas, puntiagudas, pecioladas y largas de 3 á h" , cuyas nervaduras son 6, 9-yugadas : ñores blan- cas, en espigas contraidas y formando corimbos, de corola cuyo tubo es estriado por arriba de la base, cilindrico, largo de 2" y tres veces como el cáliz, sosteniendo lóbulos deltoídeo-ovales; drupa sub- globosa peluda y blanca. T. hirsíitissima, L.: C. T. V. 363. — Vejetal sofruticos/) ó frútice, de hojas grandes, lampiñas eliptical-oblongas, obtusitas, aguzándose hasta volverse peciolo, largas de 12 á 8"; ñores blancas en espigas corimboso-apanojadas, cuyo tubo de la corola es pelierizado, cilindrico, largo de 2'" y tres veces tanto co- mo el cáliz, sosteniendo lóbulos ovales y obtusitos ; drupa sub-glo- bosa y lampiña. T. fosfidlssima, ^Y.: C. T. Y. 392-802. o. Planta herbácea voluble, con hojas lampiñas ó alampiñadas y por fin de cara inferior con puntitos rugositos, ovales o elípticas, puntiagudas, pecioladas y largas de 3 á 1" : flores en espigas des- parramadas y acorimbadas, cuyo tubo de la corola largo de 2 á 3"' delgado, pubescentito ó pubescente, es 3, 4 y raramente 6 veces tan largo como el cáliz, llevando un limbo de lóbulos subulados; anteras oblongas con su punta conivente é insertas por debajo de la gar- .sranta de la corola; drupa 2-4 ó á veces 1-loba y lampiña. T. lauri- folia, Vent. — T. syringifolia, V. C. Heliotropieas. Helvotropium. L. 1. Frutobílobo ódídimo,2. — Fruto separándose en cuatro nuececitas. 5. 2. Fruto bílobo de nuececitas cónicas, costilludas y apareadas : corola contraída por su garganta la.mpiña ; anteras distintas ; estig- ma peltado hemisférico tan largo como el estilo ; espigas sin brác- teas, 3. — Fruto dídimo cu3^as nuececitas sub -globosas son aparea- das, 4. 3. Yerba anual alta de 1 á 2', poco ramosa, derecha y pelierizada, con hojas grandes ovales ó sub-acorazonadas, cuya base se estre- clia en peciolo muy largo , festoneado- ondeadas peludas, de un DI(M)TlLEDÓ!sEuS. — CLASE XXXI. — SÜLA^SÍNEAS. 165 color verde blanquecino; flores moraduscas en espigas elongadas y simples ; anteras insertas por del^ajo del medio del tubo de la co- rola ; fruto lampiño cuyos lóbulos diverjentes son 2-dentados, con los carpidlos provistos de una cavidad superficial á lo largo de la comisura. H. indicum, L. : C. T. Y., G83. 4. Planta herbácea O sofruticosa peluda y que se eleva á 1 ó 2' de altura, de hojas frecuentemente opuestas, óvalo-lanceoladas, ovales ó lanceolado-oblongas, puntiagudas, pecioladas y cuya cara supe- rior tiene pelo esparcido por su superficie, mientras la inferior lo tiene limitado á las venas ; flores blancas en espigas simples y ordi- nariamente bipartidas ó mellizas en el vértice de un pedúnculo único ; anteras oblongas provistas de una punta, insertas por de- bajo del medio del tubo de la corola corta y eserta : estigma con- vexo, sésil y pubeseentito; fruto áspero, alampiñado, cortamente 4- lobo, de carpidios paralelos y apareados. H. parzijlorum, L. — He- liophytum 2^(irmflomm , De. — //. foetidum , De. — H. Jiumile, Po9pp. 5. Espigas sin bráctea, corola comunmente glabra en la garganta; anteras ordinariamente distintas, 6. — Espigas bracteadas ó sim- ples, cuyas flores son laterales ; corola pubescentita en la garganta; anteras subuladas y coherentes por medio de su punta pubescentita é insertas hacia el medio del tubo de la corola ; estilo corto, 7. 6. Planta anual ó fruticulosa cubierta de pelo denso y blancuzco, ordinariamente estendida por el suelo y cuyos tallos largos de 1 á 2' llevan hojas espatuladas ú ovaloblongas en espigas terminales fi- liformes 3 ó 4 ó mas raras veces 2-partidas ; corola cortamente eserta, con pelo distinto por encima de los estambres, cuyas anteras distintas y mucronadas se insertan por arriba de la base de la coro- la ; estigma cónico alampiñado y sentado; nuececitas pequeñas, sub- giobosas y pubescentitas por el dorso. H. inmidatum, Sw. — H. cinereiim, cctnescens y proctimlens, Ktk. — 11. ovalifolücm, Forsk. 7. Frútice hojoso, estriadito ó pelierizado-velludo, de 1' á 5' de alto, cuyas hojas son lanceolado-aguzadas ó lineares, sub-sentadas, arrolladas por los bordes y largas de IG"' á4'''; flores blancas en espigas cortas, densas y corvas, por fin cortamente pediceladas ; tubo de la corola largo de 2'" y casi tanto como el cáliz y cerrado por pliegues decurrentes y pubescentes y con lóbulos ovales ; estig- ma cónico tan largo como el estilo y pubeseentito por el ápice bi- dentado; nuececitas sub-globosas, pubescentitas y con un hueco por cada lado. H . friUicos.ícm, L. — II. ternatuin, Y. — II. demi- sum, R. S. — R. hirtum, Lehm. CLASE XXXI. — SOLANÍNEAS. Familia 67. — SOLANEAS ó SOLANÁCEAS. —Plantas herbáceas anuales, bisanuales y vivaces, cuya raiz, algunas raras veces, lleva tubérculos, matas ó vejetales fruticosos ó frútices lam- piños, pubescentes, velludos, inermes ó aguijonosos, algunas veces arbustos y mas raras veces hasta arbolitos, con hojas sencillas alter- nas solitarias ordinariamente, pero bastantes veces mellizas, ente- 166 DIVISIÓN SEGUNDA. FAXEKÓGAMOS. ras, dentadas, festoneadas, lobuladas y á veces mas ó menos partidas hasta parecer como compuestas, pecioladas, inermes ó aguijonosas, lampiñas, pubescentes, velludas ó aterciopeladas, sin estípulas. Flores hermafroditas solitarias ó mellizas, axilares ó en grupos ra- cemiformes axilares ó extra-axilares pedunculados con las flores pediceladas, otras veces en racimos, en espigas ó' en panojas termi- nales; las cuales constan de un cáliz raonosepalo ordinariamente persistente y algunas no raras veces acreciente, otras veces la mitad superior se desprende después de la fecundación j la parte inferior persiste y acrecenta, cuyo limbo es con 5 divisiones mas ó menos profundas y casi sien^re iguales. Corola monopétala regular, cuya forma y tamaño varían muchísimo, de limbo con 5 lóbulos masó- menos profundos, los cuales están á veces reemplazados por igual número de ángulos puntiagudos, cuyo tubo mas ó menos largo lleva 5 estambres pegados en su interior y alternos con la»» divisiones del limbo ; estivacion torcida; los estambres son esertos ó inclusosy or- dinariamente con filamentos mas ó menos largos, cuyas anteras bi'^ loculares y ordinariamente bastante grandes y basifijas se abren á favor de poros situados por el ápice ó- de grietas lonjitudinales; pis- tilo formado de un ovario único, supero, sentado en un disco hipó- jino que da también inserción por su alrededor á la corola y por consiguiente á los estambres, con 2, 3 y raras veces 4 celdas polis- permas y con dos placentas axiles, de cuyo vértice sale un estilo simple mas ó menos largo y terminado por un estigma cabezudo en- tero ó bílobo. El frato consiste en una baya mas ó menos gruesa, cuyo tamaño, color y forma varian bastante; ordinariamente lam- piña, pero algunas veces mas ó menos pubescente, 2-3-locular y po- lisperma ; otras veces es una cápsula con 2 ó 4 celdas y que se abre por 2 ó 4 ventallas y cuya dehiscencia es septícida: semillas ordi- nariamente ásperas, pequeñas, frecuentemente arriñonadas y com- primidas, formadas de un epispermo algo áspero, de un embrión mas ó menos arqueado ó recto alojado- en un endospermo carnoso. Análisis dicotómim d& las- tribus y siib^tribns, r. Embrión siempre encorvado en derredor del endospermo, ar- queado, semi-arqueado ó en espiral. Algunos ovarios r-5-6-locula- res dosbiloculares v reunidos en uno único. T. I. Nolaníneas, 2. — Embrión corvo mas ó monos recto; ovario único bilocular, mas rara vez 1-3-4-locular, de celdas polispermas; fruto indehiscente membranoso, abayado capsular 2 y mas raras veces 1-3-4-locular, cuyos muchas semillas están mas ó menos comprimidas, arriñona- das ó romboídeo-redondas y mas rara vez trígonas, con el hilo sub- marjinal. T. II. S-olaníneas, 31 2. Corola regular; un estilo único central y basilar; algunos ova- rios libres 1-5-6 loculares, cuyas celdas son monospermas; drupas distintas carnosas 1-6 loculare. S. T. I. Nolaníneas. — Corola regular; 2 ovarios 2-3-loculares reunidos en uno único 2-partido ó 4-locular, cuyas celdas son monospermas. S.-T. 11. Grabowskíeas. 3. Corola irregular, campanudo-sub-bilabiada ; filamentos de los-- estambres membranosos y reunidos por la base, fruto no carnoso^ DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXI. — SOLANÍXEAS. IQl sub-globoso, membranoso, indehiscente 2-4-locular y t^in ventallas; placentas centrales reunidas: cotiledones del embrión semicilíndri- cos j vueltos en espiral. S -T. I. Triguereas. — Corola regular. 4 4. Embrión mas ó menos encorvado, 5. — Embrión mas ó menos recto, 7. 5. Fruto abayado siempre; embrión mas ó menos arqueado, en- teramente arqueado ó en espiral, 6. — Fruto capsular y raras veces abayado, incompletamente 4-locular, cotiledones del embrión mas ó menos arqueados y cilindricos. S. T. II. Datueeas. C. 6. Corola enrodada, globosa ó anchamente campanuda, cuyo tubo es cortísimo; anteras grandes erguidas igualando los filamentos, biporosas por el ápice ó lonjitudinalmente delwscentes por la parte interior; ó con los filamentos mas cortos que las anteras y lonjitu- dinalmente dehiscentes por grietas. S.-T. III. Eusoláneas. A. — Corola campanuda, tubulosa é infundibuliforme, de estivacion val- var plegada ; ovario globoso ú oval, cáliz ordinariamente 5-partido y mas rara vez 5-fido. S.-T. lY. Atropíneas. B. 7. Embrión siempre enteramente recto, 8. — Embrión casi recto ó lijeramente arqueado, 9. 8. Cápsula con pocas semillas; estigma obtuso. S.-T. Y. Res- TÍEAS. — Cápsula bilocular, con valvas semi-agrietadas ó hendidas; semillas pocas y tríquetras con hilo basilar y pegado en la parte mas inferior del tabique. S.-T. Yl. Metemichíeas. 9. Casi recto ó lijeramente arqueado y subcilíndrico de cotile- dones mas cortos y clavi formes : cápsula bilocular cuyas valvas se separan por último del tabique ; ovario sentado, las mas veces una glándula hipójina ciñe su base; estigma cabezudo y bílobo. S.-T. YII. HiosciÁiiEAS. — Embrión casi recto y nunca lijeramente ar- queado, 10. 10. Sub-cilíndrico de cotiledones sub-comprimidos; cápsula bilo- cular cuyas valvas se separan por último del tabique, ovario estipi- tado pluri ó polispermo ; estigma bilaminado. S.-T. YIIL Fabiá- neas. — Sub-cilíndrico, de cotiledones pequeños ovales y compri- midos, fruto abayado siempre, con semillas pocas y angulosas, cuyo hilo ventral está colgante de la parte media del tabique ; ovario es- tipitado; baya bilocular. S.-T. IX. Cestreas. D. A. Eusoláneas. G. i. Solanum, L. 1. — Anteras mas ó menos oblongas, 15. — Anteras nunca oblongas, delgadas y aguzadas por el vértice provisto de poros diminutos terminales ó estrorso-termi - nales, 2. 2. Nunca jamas formando grietas, 3. — Siempre formando grie- tas transversales, 14. 3. Hojas inermes ó aguijonosas solamente por la costilla, 4. — Hojas siempre armadas de aguijones fuertes, rectos y situados sobre las nervaduras v sobre las costillas, 10. 4. Tallos provistos de aguijones delgaditos y rectos ó inermes, 5. — Tallos nunca inermes, 6. 5. Arbusto inerme estrellado pubescente y por último alampiña- do, como de 3 á 4' de altura, con hojas oblongo-lanceoladas, acumi- nadas, enteras ú ondeadas, pecioladas y largas de 6 á 2"; fiores 168 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. blancas en cimas laterales, simplemente racemiformes, peduncula- das j cujos pedicelos son cabizbajos por último; de cáliz largo de h'" con 5 dientes y mucho mas cortó que la corola 5-partida y larga de 10 á 12'", cuyos lóbulos lanceolados y puntiagudos son casi tan largos como los estambres elongados casi encerrando el estilo fili- forme y largos de 3'" lj2 ; estigma diminuto; baya globosa roja de 4'" de diámetro. S. racemosiim, L.: C. T. V., 551. — Arbusto de 3 á 4' de alto, muy ramoso, estrellado pubescente y aguijonoso, cuyo pelo y aguijones finitos comprimido-cónicos por la base y rectos son largos de 3 ó 1'" y de color amarillo aleonadito ; hojas oblongo-lan- ceoladas, muy aguzadas, enteras ú ondeadas, largas de 6 á 2", pe- cioladas y aguijonosas por la costilla ó inermes. Por ambas caras y especialmente por la inferior velludas; flores blancas á veces algo teñidas de púrpura en racimos simples, delgados, flojos y lateriflo- ros, largamente pedunculados, con pedicelos colgantes; cáliz 5 -den- tado mucho mas corto que la corola larga de 8'" á 10'", 5 partida, cuyos lóbulos lineares y obtusitos son mitad mas largos que los es- tambres, cuyas anteras lineares tienen 2'" li2 de largo ; estilo es- peso por la parte eserta de su punta. Baya pisiforme roja. — S. igneum, L. 6. Tallos provistos de aguijones recorvados, corola 5-partida, 7. — Tallos con aguijones rectos ó muy rara vez algo recorvados; co- rola 5-fida y plegada por la base. Arbustos tomentosos y aguijono- sos á lo largo de los ramos, 9. 7. Arbustos abejucados ó de tallos sarmentosos ó como volubles, escabrosos y aguíjenosos sobre las ramas, peciolos y costillas de las hojas, todos los aguijones cortos y recorvados y á la vez estrellado- pubescentes, 8. — Tallos nunca ni sarmentosos ni volubles tampoco, arbustos escabrosos, con aguijones cortos y recorvados sobre las ra- mas, peciolos y costillas á la vez estrellado-pubescentes; hojas elip- tical-oblongas, puntiagudas, enteras y un poco aguzadas en peciolo largo, de cara superior verde oscuro y alampiñada, mientras la in- ferior es velludo-aterciopelada y largas de 6 á 2" li2; flores en cimas laterales corimbiformes, cortamente pedunculadas, cuyos pedicelos inermes son velludo-aterciopelados, así como el cáliz 5-fido, casi un 1{3 de la lonjitud de la corola que tiene 5'" y es 5-partido, con lóbu- los lanceolado-lineares, mientras los segmentos de la corola son su- bulados, casi dos veces mas largos que los estambres desiguales ; baya globosa amarilla. S. micr anth a, L&m. — S. ohscumm, Sieb. 8. Vello raro, diminuto y nulo en las partes verdes, hojas oblongo- lanceoladas ú óvalo-lanceoladas, largamente aguzadas, ondeado- enteras ó lijeramente ondulosas, largamente pecioladas, membrano- sas y largas de 5 á 4" ; flores blancas disciplinadas, en cimas latera- les flojas, paucífloras, cuyos pedicelos son inermes, así como el cáliz 5-fido, cuyos lóbulos subulados son provistos de un apéndice largo, casi 1{4 de la lonjitud de la corola 5-partida, cuyas divisiones linea- res y puntiagudas esceden un poco los estambres, cuyas anteras son largas de 4'"; baya amarilla, S. Uncifolium, Jacq. — S. crotonoi- des, Sieb. — S. i/iaqicale, Prl. — S. preslei y clavifactum , Dun. — Aguijones de base comprimida; hojas elípticas ú óvalo-lanceoladas, DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXI. — S-OLANÍNEAS. ll)9 sinuoso-aniírulosas, pecioladas, concóloras j de color verde oscuro y largas de o" á4"; flores azulitas en cimas laterales desparramado- racemiformes ó acorimbadas, de cáliz aguijonoso, 5-fido, cuyos ló- bulos subulados tienen una punta corta, y son 1[3 mas cortos que la corola, larga de 6'", tomentosa esteriormente y 5-partida, cuyas divisiones oblongo-lanceoladas esceden un poco alas anteras; baya globosas. ;S'. scabrum. V. — S. xolvMle, Sw. C. T. V., 393. 9. Algunas raras veces inerme, aguijones apartaditos, rectos y sub-comprimidos ; vello estrellado; hojas ovales, sinuoso-angulosas ó sub-enteras, puntiagudas, sub-acorazonadas ó truncas por la base, largamente pecioladas, largas de 8 á 2'', con las costillas y los pe- ciolos aguíjenosos, de cara superior escabrosa, mientras la inferior es velludo-aterciopelada; flores blancas en cimas laterales, ordina- riamente bífidas, escorpioídeo-corimbiformes, con pedicelos glan- dulosos, de cáliz inerme, 5-fido y por último 5-partido, cuyos lóbu- los ovales son mucronado-agudos, 3[4 mas corto que la corola estre- llada 5-fida, con las divisiones óvalo-lanceoladas y laríías de 5 á T"; estilo encorvado por el ápice. S. torvum. Sw. : C. T. Y., 552. — Nunca inerme, aguijones distantes, delgados y rectos, vello-estre- llado; hojas ovales ú oval-oblongas, ondeado-enteras ó lijeramente sinuosas, obtusitas, de cara superior escabrosa, mientras la inferior es velludo-tomentosa, raras veces con algunos aguijones por la cos- tilla; de peciolo inerme y largas de 2 á3" ; flores azuladas en cimas laterales, paucífloras, de cáliz aguijonoso por la base ó inerme, 5-fido, con lóbulos ovales ú óvalo-lanceolados y obtusitos, 2[3 mas corto que la corola 5-fida, larga de á 6'" y cuyas divisiones óvalo-lan- ceoladas son dos veces tan largas como las anteras de 2'"; baya achatado globosa; roja y ceñida por el cáliz acrecenté y foliáceo. S. i'iichisum, (jY. — S. tomentosum americanum , Grisb. — S. to- meíitoswm, Hort-Germ. — S. hybridum, Dun. 10. Arbustillos, 11. — Matas sofruticosas, 12. 11. De tallo ceniciento, ramoso y que se eleva á 3' ó 5' de altura, tomentoso, con pelo estrellado, aguijonoso en las ramas y costillas délas hojas, cuyos aguijones amarillos y largos de 2 á 8'", fuertes, rectos, son comprimidos ó recorvos, raras veces inermes, con hojas anchamente ovales, anguloso -pinatífidas, de cara superior esca- brosa, mientras la inferior es peludo -tomentosa, con los lóbulos del- toídeos y estendidos, largas de 8 á 3" y pecioladas; flores azules en cimas laterales sub-sentadas, escorpioídeo- contraidas, de cáliz inerme, 5-festoneado, con los dientes redondeaditos ó mucronados, y 3 veces mas cortos que la corola 5-partida, esteriormente tomen- tosa, larga de 3 á 6'", con los segmentos óvalo-lanceolados; anteras óvalo-lanceoladas, encorvadas y largas de 2 á 3'" ; baya amarilla, ancha de 6'". S. stratnonifolmm, Jacq. — /S'. toxicarium, Rich. — /S'. demerarense, Dun. C. T. V., 552. 12. Baya amarilla grande, cónica y larga de 2" á 3", sobre 1 1|2 á 2" de ancho, lustrosa y colgante, 13. — Baya globosa encarnada, lampiña, de 6 á 8'" de diámetro, sostenida por el cáliz pequeño; vejetal sofruticoso de 2' á 4'. de altura, muy aguijonoso y con pelo simple, articulado y por fin alampiñado, aguijones delgados y rec- no DIVISIÓN SEGUNDA. — FANEEÓCrAMOS. tos; largos de 3"' y amarillos; hojas ovales, pinatífidas, raramente ondeado-enteras, cuyos lóbulos son oval-oblongos ó frecuentemente ¿inuoso-dentados, largas de 6 á4", largamente pecioladas, con las costillas muy aguijonosas y pestañosas por la márjen ; flores blan- cas en cimas laterales paucíñoras, de cáliz frecuentemente armado y 5-fido, con lóbulos óvalo-lanceolados y aguzados, 2i3 mas corto que la corola larga de á'" á b'" , alampiñada, 5-fida, cuyos segmentos son oblongo-lanceolados; anteras óvalo-lanceoladas. /S'. aculeatissimum, Jacq. — S. ciliatum, Lam. — S. MyriacantJmm, Dun. 13. De base enteramente desprovista de tubérculos con figura de pezón, pero cuyo vértice se termina á manera de pezón: planta herbácea ó subfruticosa, ramosísima, de 2' á 4' de alto, aguijonosa, con vello simple, articulado, blanco y denso, aguijones amarillen- tos, fuertes y comprimidos, largos de 4 á 10'", con hojas grandes óvalo-angulosas, sinuosas, pecioladas, con las costillas y nervaduras aguijonólas, largas de 4 á 6", sobre 3" á 3" 1|2 de ancho; flores azuladas ó azul-moraduscas, en cimas laterales, paucífloras y con- traidas, de cáliz 5-partido, con segmentos subulados y 3 veces mas corto que la corola, larga de 6 á 8'", peluda, 5-partida, con divisio- nes lanceoladas, anteras oblongo-lanceoladas, aguzándose desde el medio y largas de 5'". S. mammosum^ L. — S. pectinatum, Dun. : C.T.Y.,553. — Baya del mismo tamaño y color que la anterior, pero cuya base está adornada por su circunferencia de 3 á 5 pezones largos de 6 á 10'" y anchos de2 á 3'"; vejetal algo mas bajito que el precedente, con el cual tiene mayor analojía y todo el semblante. S. mamosissimum, R. de G-y. C. T. V., 553. 14. Planta herbácea ó sofruticosa, pubescente ó tomentosa con pelo estrellado, aguijonosa ó inerme, cuyos aguijones distantes, rectitos ó recorvados y cortos están comprimidos, alta de 3 á 4' y ordinariamente poco ramosa, con hojas ovales ó oval-oblongas, on- deadas ó sinuosas, largamente pecioladas; flores azuladas en cimas laterales, ovales y puntiagudas ; corola, larga de 5 á 8'" y 5-9-fida y con segmentos deltoídeos, que lleva 5-9-estambres, cuyas anteras largas de 2 á 3'" son oblongo-lanceoladas; baya grande, ovoidea, sub-globosa ó elíptica, larga de 2 á 6", sobre 2 y hasta 3" de diáme- tro, blanca ó morada, lisa y lustrosa, sostenida por el cáliz un poco acreciente ó crecido. S. melongena, L. : C. T. V., 551. 15. Anteras oblongas solamente, obtusitas, con poros diminutos situados en su ápice trunco, 21. — Anteras oval-oblongas ú oblon- gas, 16. 16. Obtusas, poros grandes, introrsos y terminales, frecuente- mente volviéndose grietas lonjitudinales; tallos inermes, flores ci- mosas, 17. — Poros diminutos situados en su vértice obtusito; no volviéndose nunca grietas; tallos inermes, flores en cimas laterales simplemente ombeliformes ó corimbiformes, á veces solitarias, 21. 17. Tallos herbáceos, 18. — Tallos leñosos, 19. 18. Yerba anual, alampiñada mas ó menos ramosa y alta de V ]{2 á3', con hojas ovales, acuneadas por la base peciolada, enteras ó si- nuoso-dentadas ; flores blancas, pequeñas y en cimas laterales ombe- liformes, pedunculadas, de corola 5-fida, dos veces tan largas como DICOTILEDÓ^'EOS. — CLASE XXXI. — BOLANÍMEAS. 171 el cáliz 5-fido ; filamentos lampiños con anteras cortamente oblongas y por fin lonjitudinalmente dehiscentes: baya globosa, amarillento- blancnzcas, acompañada del cáliz reflejo. S. nodijlorum, Jacq. : C. T. V., 551. — Con las dos variedades siguientes : de baja colorada y con las liojas sinuoso-dentadas. S. erytJirocar'pnm, con las hojas tan sinuoso-dentadas que parecen compuestas. >S'. cJieiiopodioides, Desc. : hojas sinuoso-dentadas con la ha va negra. S. oleroxeum, ho- jas enteras y baya negra. /S'. cariljaum. C. T. Y.. 55L 19. Hojas lampiñas ó alampiñadas, 20. — Hojas lepidotas ó cu- biertas de un polvo escamoso. — Arbolito ó arbusto que se eleva á 15 ó á veces á 25', pero siempre de tronco delgado, ramosísimo en sn parte superior, de corteza color ceniciento y cuyas ramitas son densamente escamosas, amarillentas, llevan hojas elípticas ú ovales, puntiagudas, pecioladas, enteras ú ondeadas, de cara superior pro- vista de escamitas diminutas, mientras la inferior es de ordinario mas densamente lepidota, y largas de 6 á 4", con el peciolo de 6'" á 8'"; flores blancas en cimas terminales ó laterales, largamente pe- dunculadas, con los pedicelos amanojados, largos de 4 á 5'", esten- didos ó cabizbajos, de vértice espeso y escamosos, así como el cáliz, 4-lobo, de lóbulos redondito-deltoídeos y mucho mas cortos que la corola 4-partida, con los seg'mentos oval-oblongos y obtusitos; ante- ras oblongas y largas de 2'" ; baya ovoidea. 8. ]3iíntulat2im. Dun. 20. Arbusto lampiño alto de 4 á 6' ó algo mas, muy ramoso, lam- piño, con hojas eliptical-oblongas ú oblongo-lanceoladas. puntiagu- das, enteras, pecioladas, ordinariamente raellizas, con una mas pe- queña, de cara inferior, con la axila de las venas peluda ó alampiñada, largas de 5 á 3", con el peciolo de 8 á 2'"; flores blancas en cimas pedunculadas. laterales, formadas de racimitos enrollados, cuyos pedicelos mas largos tienen 6"'; de cáliz pequeño, 5-fido, con corola 5-fida, de segmentos oval-oblongos y puntiagudos, y largos sola- mente de 4 á 6'"; anteras ovoídeo-oblongas la mitad tien largas como los segmentos de la corola; baya amarilla, globosa y de 4 á 6'" de diámetro. S. triste, Jac. : C. T. V., 554. 21. Cáliz trunco cuyas 10 nervaduras se dilatan en apéndices in- framarjinales, 22. — Cáliz con 5 divisiones; arbusto alto de 4 óT, ramosísimo, lampiño y de hojas lanceolado-oblongas ó eliptical- oblongas, obtusitas, aguzándose por la base hasta volverse peciolo, enteras y largas de 4 á 1 1[2"; cimas corimbiformes ordinariamente, con pocas flores, que á veces son solitarias, de cáliz 5 fido,conlos seg- mentos oblongos, obtusos y á veces mellizos, 1{2 ó 1{6 mas corto que la corola 5-fida, cuyos lóbulos arriñonado-redonditos son mucrona- dos y mas cortos que el tubo chatito y estendido ; anteras oval-oblon- gas ; estilo rectito; baya ovoidea negro-azulada y larga de 8 á 6'". S. Jiavanense, Jacq. — S. coriaceum, Hook. — JS. hoolenanum , Spreng. — ;S'. vaccinifolium, Dun. 22. Arbusto alampiñado, pero cuya parte superior es pubescentita con el pelo estrellado; hojas ovales ú o val-oblongas, puntiagudas, pecioladas, enteras, mellizas, cuyas mayores son largas de 6 á 4'^ mientras las menores lo son de 2" solamente, con el peciolo de 6 á 8"', de cara superior lampiña, mientras la inferior es pubescentita ó 172 DIVISIÓN SEGUNDA. — FANERÓGAMOS. alampiñada; flores blancas en cimas ombeliformes sentadas, con los pedicelos largos de 8 á á'" , de cáliz largo de 2'" , con los apéndices situados efcteriormente y por debajo de la márjen del limbo trunco, oblongos, obtusos, estendidos ó recorvados, casi la mitad mas cortos que el tubo, suelen faltar raras veces; corola lampiña larga de 8'" á 10"', con el limbo sinuoso y 5-anguloso; anteras oblongas cuj'O quinto filamento es mas largo que los demás; estilo rectito; estigma clavi- forme; baya globosa, con 8'" de diámetro. >S'. neglectum, Dun. 23. Arbusto abejucado, aguijonoso ó inerme, cuyos aguijones de las ramas tomentosas y de las hojas son delgados y rectos, el pelo es estrellado, de hojas lanceolado-oblongas, obtusitas, ondeado-enteras, cortamente pecioladas y largas de 3 á2", con la cara superior esca- broso-pubescente; flores blancas en cimas laterales, pauci ó 1-floras y sentadas, de cáliz profundamente 4-5-fido, cuyos lóbulos oblongos y obtusos son la mitad mas cortos que la corola 4:-o-partida y larga de 2'", cuyos segmentos oval-oblongos y obtusitos son dos veces tan largos como las anteras que tienen V" de largo; baya globosa de 3'" de diámetro. >S', polygamum, V. G.II. Physalis, L. — Yerbas anuales, 2. — Yerba vivaz velludo- pubescente, con hojas acorazonadas ú ovales, puntiagudas, con al- gunos dientes ó enteras; segmentos calizinales lanceolado-aguzados, estrias de la vejiga calizinal apenas notables; corola amarilla larga de 6 á 8"' y con puntitos morados interiormente; anteras moradas. P. peruviana, L. — P. piihe&cens, R. Br. — P. edulis, Sims. C. T. V., 360. 2. Pubescentes, 3. — Alampiñadas, 6. 3. De tallo solamente pubescente, 4. — Enteramente pubescen- te, 5. 4. Tallo pubescente, ramoso y de hojas ovales ó sub-acorazonadas puntiagudas, dentado-sinuosas ó sub-enteras; lóbulos calizinales lanceolado-aguzados; vejiga 5-angulosa; corola amarillenta, larga de 3 á 4'" Y con puntitos purpúreos interiormente, anteras moradas. P.puhescens, L. — P. iarbadensis, Jacq. — P. hirsuta, Dun. : C. T. V., 360. 5. Viscoso pubescente, desparramado por el suelo, muy ramoso y con hojas deltoídeo-ovales, angiiloso-dentadas ; lóbulos calizinales lanceolado-aguzados, con los ángulos de la vejiga estrechos y por fin apenas notables; corola amarillenta larga de á'" , con el limbo abierto; anteras moradas. P. foítens, Poir. — De hojas sub-acora- zonadas ú ovales, con una puntita, sub-enteras ó dentadas; segmen- tos calizinales lanceolado-aguzados ; vejiga 5-angulosa; corola larga de %'" , amarillenta; anteras amarillas. P. mínima, L. — P. prui- nosa, L. 6. Hojas ovales, puntiagudas, aserradas, con dientes apretados ó con dientes apartados; segmentos calizinales lanceolado-acuminados, estrías de la vejiga apenas notables ó nulas; corola larga de 4'", amarillenta, pálida ó lijeramente coloradita por la garganta, ante- ras moradas. P. linMana, Ns. — Hojas ovales ú oval-oblongas, puntiagudas, sinuoso-dentadas ó sub-enteras; lóbulos calizinales deltoídeos, vejiga con 5 ángulos pronunciados ; corola enteramente DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXI. — SOLANÍNEAS. 173 pálida, larga de 4'", anteras moradas. P. angulata, L. — P. capsi^ cífolia, Dun. B. (J-. III. Capsicum, L. — 1. De frutos mas ó menos erguidos y nunca colgantes, 2. — Frutos siempre colgantes ó cabizbajos, 7. 2. Vejetales herbáceos j anuales, 3. — Vejetales fruticosos ó sub-fruticosos y por consiguiente vivaces y raras veces bisanuales, 4. 3. Planta herbácea, bastante ramosa, alta como de unos 3': con hojas solitarias pecioladas, elípticas ú ovales, aguzadas, enteras y lampiñas ; frutos á veces bastante gruesos , pero ordinariamente como de 4 á 6'" de diámetro, sobre 1" de largo; lisos, cónico-oblon- gos, oblongos y asperitos, angulosos, ovoideos, globosos y por fin con forma de aceituna, según la variedad á que pertenecen, acompaña- dos de la base crecida del cáliz. E . anmmm, L. : C. T. Y., 454. — Yerba de tallo ramosísimo, flexuoso, tuberculadito, lampiño y alto como de 3 á 4', con hojas de peciolos pubescentes, solitarias, ovales, aguzadas, enteras, de cara inferior asperita y pubescentita en las venas; cálices lampiños y con dientes cortísimos. C. conicum. Mey. 4. Tallos y ramos fruticosos, 5. — Tallos y ramos sub-frutico- sos, 6. 5. x\.rbustillo alto de 3 á 6', algo mas ó menos, muy ramoso, lampiño, cuyos ramos flexuosos y cilindricos se terminan por ramitas algo angulosas, alampiñaditas, que llevan hojas solitarias o mellizas, ovales, puntiagudas, enteras, pecioladas y lampiñas; cáliz por fin trunco 10-nervioso, aguzándose en pedicelo e&peso; baya roja ó amarilla, larga de 6 á 12'". C . frutescens, L. : C. T. Y., 454. — Arbustito que parece mucho el precedente alampiñado, de ramos divaricados, cuyas ramitas angulosas, estriaditas y lampiñas llevan hojas pequeñas oblongas, óvalo-acuminadas ó lanceolado-ovales, enteras, alampiñadas, á veces mellizas, puntiagudas y enteras; flores blancas pequeñas, en grupos axilares, de cáliz 5-dentado, cuya base se vuelve bruscamente pedicelo, delgado y erguido ; baya roja globosa, ovoideo-globosa, de 3 á 4'" de diámetro. B. lacca- tum, L. — C. laurifolium, Dun. : C. T. Y., 454. 6. Mata ramosa como de 3' de alto, con hojas ovales, aguzadas y pubescentes; cáliz 5-anguloso, peludo y cuyas divisiones bastante profundas son algo subuladas y estendidas; baya pisiforme, globosa ó algo ovala, roja, lustrosa y acompañada por la base del cáliz. C. microcarpum, De. — Mata ramosísima como de 3' de altura, algo mas ó menoS; cuyos ramos, verdes hacia el vértice pubescente y dividiéndose en muchas ramJtas divaricadas, son por la base blan- quecino-acanelados; hojas pequeñas, solitarias ó mellizas y des- iguales, ovales, aguzadas, ontusitas y de base casi redonda, de cara superior verde lustrosa y lampiña, mientras la inferior, mas pálida, es peluda en las nervaduras, pecioladas. C. micro2)hyllum , L. 7. Planta herbácea cuya base del tallo es leñosita, fuerte y bas- tante gruesa, asurcado, ramosísimo por el vértice y alto como de 4' á 5' ó algo menos, con hojas bastante grandes, ovales, casi enteras, algo ásperas, cuya base desigual se aguza en peciolo, de cara infe- rior con las nervaduras muy pronunciadas y mas pálida que la su- perior lustrosa, lampiñísima: flores solitarias, cuyos pedicelos de 174 DIVISIÓN SEGUNDA. — FANERÓGAMOS. las fructíferas son recorvados, leño¿itos y gruesos; baya grue^^a y hasta muy gruesa, globosa ú oval y hasta como elíptica, torrulosa ó asurcada, lisa, lustrosa, encarnada. C. dulce, L. — (-. longura. De. — Mata sub-iruticosa, derecha, alta como de unos 3' ó 4', muy ramosa superiormente, lampiña y con hojas ovales, oblongas, agu- zadas, de un color verde teñido de amarillento; fiores solitarias ó mellizas de cáliz oblicuo algo 5-anguloso, cuyo limbo algo dilatado es trunco y tiene 5 ó 6 dientecitos erguidos y obtusitos; baya agu- zada por ambos estremos, color rojo subido, larga de 1" á 2", col- gante y acompañada por la base calizinal. C. pencUdnm, AViid. G. iV. Lycopersicum, T. — 1. Bayas á veces bastante grandes y gruesas, algo chatas, irregularmente discoideas, como asurcadas, 2. — Bayas mas pequeñas, globosas ó piriformes, 3. 2. Planta anual h<írbá.cea, blancuzco-velluda, viscosa, de tallos delgados, cuyos numerosos ramos muy largos, angulosos, sonflexuo- sos casi trepadores, carnosos y llevan hojas bastante grandes, desiguales, pinatífidas, cuyas divisiones son partidas ó denta- das, muy velludo-tomentosas : flores amarillas en racimos pauciflo- ros axilares, cuyos pedicelos son unifloros, de cáliz que pasa de la mitad de la corola; baya lustrosa encarnada de 2" á 3" de diámetro vertical. L. esculentum, L. : C. T. V., 553. 3. Baya globosa siempre, 4. — Baya siempre piriforme, 5. 4. Yerba peluda, de hojas pinadas con interrupción, pinatisectas, cuyos segmentos mas largos son inciso-aserrados, con una punta deltoídea ; pedicelos sin bracteitas : cáliz la mitad mas corto que la corola; baya colorada de 3'" á 6'" de diámetro. L. Humholdtii, Dun. — Yerba anual ramosísima, de tallo y ramos largos, delgados y casi abejucados, velludo-tomentosa, con hojas interrupto-pinadas. cuyas flores en racimos paucífloros, con los pedicelos bastante lar- gos, de cáliz casi igual á la corola; bayas rojas, ó mejor encarnadas, lampiñas, lustrosas y del tamaño de una cereza. L. cera^iforme, Dun. 5. Yerba que se parece mucho á la precedente, de hojas penati- partidas con interrupción de segmentos partido-dentados, y de cara inferior alampiñada; flores en racimos flojos con los pedicelos lar- guitos y sin brácteas ; lacinias del cáliz casi iguales á la corola : "baya colorada, lustrosa, lampiña y del tamaño de una pera de las mas pequeñas. L, pyrlforme, Dun. G. V. AcNiSTLS arhorescens, Schlecht. C. T. V., 555. C. Datúreas. G. VI. Datura, L.l. Plantas herbáceasanuales, 2. — Arbusto cuyo tallo bastante ramoso superiormente y de corteza ce- nicienta se eleva á unos S' á 20' de altura, con las ramitas y hojas pubescentes ó alampiñadas bastante grandes, pecioladas ovales ú ovaloblongas, enteras aguzadas por ambos estremos ; primorosísi- mas flores blancas, grandes, como colgantes, de cáliz ventricoso, tubuloso, anguloso v con 5 dientes, larao como el tubo de la corola muy grande, campanuda superiormente y de limito con 5 dientecitos correspondiendo con otros tantos ángulos muy visibles en el tubo largo, tiene como 4" á 5" de largo sobre 3" de ancho superiormente: anteras coherentes y lineares, biloculares; cápsula inerme; flores de olor muy suave, D. suaveolens, N. B.: C. T. V., 558. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXi. SOLANÍXEAS. 1^75 2. Alampiñadas, 3. — Pubescente de como 3' de altura, iriuv ra- mosa Y CUYOS ramos estendidos son dicótomos y algo rojizos así co- mo los peciolos, con hojas ovales, pecioladas, bastante grandes, de base inequilateral v de vértice aguzado, enteras ó con algunos pocos dientes, velludas por ambas caras, muy suaves, blanquecino-ver- des; flores bastante grandes, blancas, rectas, pero el pedúnculo no tarda en doblarse después de la fecundación, de manera que el ova- rio se vuelve colgante, de cáliz flojo 5-dentado v casi la mitad mas corto que la corola grande j larga de 6", cuyo limbo abierto es cor- tamente 5-dentado y con el tubo sub-cilíndrico; anteras distintas oblongas y largas de 4'" á 5'" ; cápsula colgante y cabizbaja, casi globosa. as"uijonosa, con aa'uijones suljulados v largos de como 6'" á 8'". D. Metei, L.: C. T. v':, 557. 3. Cápsula erguida , 4. — Cápsula colgante ó cabizbaja ; hojas ovales, ondeadas, con algunos pocos dientes grandes, bastante gran- des, pecioladas, de cara superior lampiña, mientras la inferior es algo alampiñada : cáliz 5-dentado, 1{3 mas corto que la corola, blanca ó á veces teñida de morado, larga de 6" á 1", frecuentemente doble, abierta y aguzándose gradualmente hasta transformarse en el tubo sub-cilíndrico, con los 5 dientes largamente subulados; anteras linear-oblongas y largas de 6'" ; cápsula muricada cuyos aguijones cortos y tuberculiformes tienen como 2'" de largo. D. fastuosa, L. 4. Tallo, ramos y peciolos de las hojas morados, de como 2' lf2 á 3' de alto, con hojas ovales, sinuoso-dentadas verde-moradusco, pe- cioladas ; flores violadas de cáliz 5-dentado la mitad mas corto que la corola larga de 3" á 4", cuyo limbo 5-dentado y abierto se va es- trechando gradualmente hasta formar el tubo cilindrico, sus dientes son subuladofiliformes; anteras distintas, oblongas y largas de 2"' 1{2; cápsula erizada de aguijones iguales, subuliformes y largos de 4"'. D. tutuJa, L. — Tallo verde, bastante ramoso superiormente, alto de como 3', alijo mas ó menos, cuvos ramos divaricados llevan 'O y *.■ hojas ovales, bastante grandes, sinuoso-dentadas, pecioladas, verde- oscuras, lustrosas; flores blancas ó teñidas de rosado, de cáliz 5- dentado, la mitad mas corto que la corola, larga de %" 1{2 á 3" j cuyo limbo abierto y con 5 dientes subulado-filiformes se va estre- chando gradualmente hasta formar el tubo cilindrico; anteras dis- tintas, oblongas y largas de 2'" ; cápsula elipsoídea cubierta de agui- jones cuyos superiores son dos veces mas largos que los inferiores. D. stramonüim, L.: C. .T. V., 556. G.II.V.Nicotiana, L. Planta herbácea alta de l'á2", deliojas lan- ceoladas ó lanceolado-lineares, sentadas, cuyas inferiores mas gran- des son elípticas y aguzadas por la base; flores en cimas racimifor- mes, verduzco-amarillentas, de cáliz 5-fido con lóbulos iguales y lanceolado-lineares, 1[3 mas corto que la corola infundibuliforme, de tubo filiforme y claviforme estrechado, contraído por debajo de los segmentos cortos y lanceolado-aguzados ; cápsulas por último cortamente eserta. N. picsilla, L. — N. angustifolia, R. P. — Yerba alta de 3' á 4' y mas, de tallo bastante grueso, recto y muy poco ramoso con hojas oblongo-lanceoladas, muy largas, y á veces bastante anchas, las hemos visto, no raras veces, larcas de 2' 1(2 y 176 DIVISIÓN SEGUNDA. — FANERÓGAMOS. anchas de 6" á 10" en el medio, por ambos estremos aguzaditas, casi sentadas, puntiagudas, cuyas inferiores son decurrentes; flores rosaditas en cimas apanojadas algo corimbiformes, de cáliz 5-fido con los segmentos óvalo-lanceolados j sub-iguales, 1|3 mas corto que la corola infundibuliforme de tubo claviforme y no estrechado, cuyos lóbulos son subulado-deltoídeos y abiertos; cápsula corta- mente eserta. N. taiacv.m, L.: C. T. V., 559. D. G. VIII. Cestrum, L. 1. Filamentos muy cortos é insertos en la garganta de la corola^ 2. — Filamentos mucho mas largos que las anteras insertos en la parte media ó por arriba del medio del tubo de la corola, 3. 2. Flores amarillo-pálidas pediceladasy en cimas racimiformes ó paucífloras; arbusto lampiño de hojas apergaminado-membranosas oblongas ó elípticas, con una punta obtusita, delicadamente venosas y largas de 5" á V 1|2; pedicelos largos de 1'"; cáliz con 5 dientes ovales y obtusos, tubo de la corola largo de 6"' á 8'", claviforme en- chanchándose gradualmente hasta formar la garganta; segmentos ovales, obtusos y por fin reflejos, con el estilo eserto ; estambres in- clusos é insertos por dentro de la garganta, cuyos filamentos son tan largos como las anteras enteras ; baya ovoidea azul, larga de 3'" y cortamente aguzada por la base. C . pallidum, Lam. — C. tincto- rium, Jacq. — Flores Idancas sub-sesiles en cimas contraidas paucí- floras y sub-sentadas : arbusto cuyas ramitas pubescentitas llevan hojas apergaminado-membranosas , óvalo-lanceoladas, ó eliptical- oblongas, obtusitas, alampiñadas con venas finitas y largas de 2" á 4". pecioladas; cáliz con 5 dientes subulado-deltoídeos; tubo déla corola largo de 8'' á 12'", filiforme, lampiño, bruscamente hinchado por la garganta; lóbulos oblongo-lineares; estambres inclusos é in- sertos por dentro de la garganta : filamentos tan largos como las anteras enteras ; baya ovoidea azul y cortamente aguzada por la base. C. vespertinum, L.: C. T.Y., 852. 3. Vejetales no lampiños, 4. — A^rbustos lampiños, 5. 4. De ramitas pubescentes con hojas membranosas, ovales, pun- tiagudas, largas de 6'" á 5'". alampiñadas, finamente venosas y pe- cioladas; cimas contraidas sub-sesiles, cuyas flores sub-sentadas tienen el cáliz cortamente 5-fido de segmentos deltoídeo -subulados; la corola larga de 12'" á 10'", cuyo tubo filiforme, claviforme y lampiño se va ensanchando gradualmente, y de lóbulos lanceolado- lineares, estambres inclusos, insertospor encima del medio del tubo de la corola y cuyos filamentos son enteros ; baya oblonga. C . latifolium, Lam. — C. cJiorantíim, Dun. — Ramitas velludas con pelo denta- dito ó pelierizadas ; hojas apergaminadas oval-oblongas ú óvalo- lanceoladas, obtusitas por el vértice, y sub-acorazonadas ó redon- ditas por la base, arqueado-venosas, de cara inferior con las nerva- duras proeminentes y con pelo persistente sobre la costilla, largas de 5" á 2" y pecioladas; cimas contraidas sub-sesiles formadas de flores sub-sentadas y verdoso-blanquecinas, de cáliz largo del li2"' á 2'" y con dientes deltoídeas ; corola larga de 6'" á 8'", cuyo tubo olaviforme y estrechándose gradualmente sostiene lóbulos ovales y obtusitos, llevando los estambres inclusos en él y pegados por su DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXI. — SOLANÍNEAS. 177 medio; filamentos pubescentes por debajo del diente ; baya ovoidea negra y larga de 6'". C. Mrtum, Sw. — C. liirsutiim, Jacq. 5. Cimas sub-sesiles contraidas cuyo eje es pubescente, 6. — Ci- mas pedunculadas de eje lampiño, 7. 6. Hojas apergaminadas, grandes, oblongas ú oblongo-lanceola- das, aguzadas, arqueado-venosas, cuyas nervaduras preeminentes por la cara inferior por fin se hacen visibles por la superior y son largas de 8" á 4"; flores sub-sesiles amarillentas y cambiando de color, de cáliz largo de 1"' á 2"', con 5 dientes deltoídeos ó diminu- tos, de corola larga de 6"' á 8'", cuyo tubo claviforme y gradual- mente aguzado es glabro y con lóbulos óvalo-lanceolados, u oval- oblongos ; estambres inclusos é insertos casi por el medio del tubo de la corola, cu^^os filamentos pubescentitos son enteros ó provistos de un dientecito situado por encima de la parte pubescente ; baya ovoidea. C, macropliylUcm , Vent. — C. megalophijllum, Dun. — C, hellasomhra, Dun. — C. vespertinum, vSieb. — C. Schotii, Seudtn. — C. conglomeratwn, R. P. — Hojas coriáceas, lustrosas elipticas, obovales ú oblongas, obtusitas ú obtusas con venas apenas notables ó delgaditas, pecioladas y largas de 4" 1[2 á 2''; flores verdoso- amarillentas, cambiando de color y cortamente pediceladas; de cáliz con 5 dientes diminutos ó deltoideos; corola larga de 8"' á 6'" con el tubo claviforme lampiño y gradualmente aguzado, de lóbulos óvalo-redondeaditos ú ovales; estambres inclusos é insertos por ar- riba del medio del tubo de la corola, cuyos filamentos pubescentitos inferiormente son enteros ó están provistos de un dientecito situado por arriba de su base; baya ovoidea larga de 6'" á 5'". C. laurifo- linm, Cher. — C. alaternoides, Desf. — C. suhtriflorum, Dun, 7. Flores sub-sesiles blancas y muy fragrantés; filamentos lampi- ños y siempre enteros ; arbusto ramoso de 6' á 8' de alto, con hojas apergaminado-coriáceas ovaloblongas, obtusitas, delicado-venosas, pecioladas y largas de 4" á 3" ; cimas pedunculadas y contraidas ; cáliz con 5 dientes diminutos ó deltoídeos; tubo de la corola largo de 6'" á 8'", claviforme, lampiño y aguzándose gradualmente; estam- bres inclusos é insertos por debajo de la garganta, cuyos filamentos son casi tres veces mas largos que las anteras ; baya sub-globosa de 3'" á 4'" de diámetro. C . diurnum, L.: C. T. V., 853. Flores pedice- ladas verdoso-amarillas, de filamentos pubescentitos inferiormente, tan pronto enteros como provistos de un dientecito situado por arri- ba de la base; arbusto ramoso, de como 6' á 8' de alto y con hojas apergaminado-coriáceas,. ovales ú oval-oblongas, con una punta ob- tusita y largas de 4" á %" li2, delgado-venosas; cimas racimiformes mas largas que los peciolos, con los pedicelos inferiores frecuente- mente tan largos como el cáliz, que lo es de 2'" á 3'", con 5 dientes oval-redondeaditos ó deltoideos y casi 1{3 mas corto que el tubo de la corola, que es largo de 8"' á 9'", cuyo tubo claviforme y lampiño se va estrechando gradualmente, sostiene los lóbulos ovales y obtu- sos y contiene los estambres inclusos y pegados por arriljade su me- dio. C. noctwiium, L.: C. T. V., 853. TOMO II 12 178 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEKÜÜAMOS. CLASE XXXII. — PERSONADAS. Familia 68. — F SCUOFUZAHlICF A S.— Yeieia\es ordina- riamente herbáceos, subfruticosos, raras veces leñosos, de hojas simples, pecioladas ó sentadas, enteras ó frecuentemente festonea- das, dentadas y hasta lobadas algunas veces, opuestas ordinaria- mente ó verticiladas y alguna vez que otra alternas, comunmente sin estípulas; flores hermafroditas en grupos axilares, en espiga^ terminales, sencillas ó ramosas y en este caso racimosas, bastantes veces solitarias en la axila de las hojas, formadas de un cáliz mono- sépalo persistente 3 ó 4 y ordinariamente 5-fido, cuyos segmento^-, mas ó menos largos, son desigualitos; corola irregular monopétala, personada ó enmascarada, ordinariamente bilabiada, cuyo tubo lleva pegados en él dos estambres didínamos y rarísimamente 4 ó 5 per- fectos y siempre desiguales; pistilo compuesto de un ovario único supero, simple, bilocuíar, con la placenta axil, polispermo, sosteni- do por un disco hipójino y cuyo vértice lleva un estilo sencillo mas ó menos largo, ordinariamente filiforme, terminado por un estigma simple, cabezudo ó á veces bílobo; cápsula cuya dehiscencia es locu- lícida ó septícida, otras veces se efectúa por medio de poros que se hallan hacia el vértice; rarísimas veces el fruto es una baya; semi- llas con un endospermo carnoso; embrión pequeñísimo, derecho y de raicilla vuelta hacia el hilo ú opuesta á su punto de inserción. Análisis dicotómica de las suh-órdenes y de las trilus. 1. Corola bilabiada, cuya estivacion es plegada ó empizarrada: labio superior las mas veces plegado según los senos; infloretcen- cia centrífuga desde el principio. S.-órd. I. Salpiglosídeas. A.l. — Corola mas ó menos bilabiada, de estivacion siempre imbricada, 2. 2. Labio posterior esterno, inflorescencia centrípeta ó compue^tia. cuya parcial está en cima centrífuga, mientras la general está en tirso centrípeto. S.-órd. IL Antirrhinídeas, 3. — Labio posterior nunca jamás esterno: inflorescencia centrípeta ó compuesta, pero rarísimas veces centrífuga. S.-órd. IIL RinanthídeaS, 9. 3. Corola siempre bilabiada, mas ó menos enmascarada, tubulada y frecuentemente espolonífera; cápsula abriéndose por medio de poros; inflorescencia centrípeta uniforme; hojas opuestas ó vertici- ladas. T. L EuANTiRRHÍ-NEAS. — AutirTMniim. — Corola mas ó menos bilabiada, 4. 4. Xo bilabiada, poro con dos lóbulos enteros y cóncavos, cáliz con 4 divisiones que parecen valvas, inflorescencia compuesta ; hojas opuestas ó verticiladas. T. IL Calceoláeieas. — Calceolo/íia. — Mas ó menos bilabiada, tubulada ó no, 5. 5. No tubulada, enrodada, cuyos lóbulos planos tienen una foseta, ó bilabiada; estambres declinados: inflorescencia centrípeta unifor- me, hojas alternas. T. líl. Verbasceas. — Verho.scum. — Mas ó menos tubulada, 6. DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXXII. — PERSONADAS. 119 6. Corola enrodada y raras veces tubulosa, bilahiada, con una loseta ó etjpolonada; cápsula con dos ventallas; inflorescencia cen- trípeta; hojas inferiores opuestas. T. lY. HemimerídeaS. B. — Corola siempre tubulosa, T. 7. Cápsula siempre con dos valvas, 8. — Cápsulas con 2 ó con 4 ventallas, algunas raras veces una bava indehiscente ; estivacion de los segmentos calizinales empizarrada; inflorescencia compuesta. T. Y. QuiLÓNEAS. EscTof alaria. 8. Cáliz ancho, de estivacion valvar; inflorescencia completa, pedúnculos con brácteas opuestas. T. YI. Escobedieas. — Alectra Brasilensis, Benth.; Mafacana, Vrco.; Cane-küler , Antillas in- glesas. — Corola rarísimas veces sub-redondeadas; cáp.^ula algunas raras veces indehiscente, estivacion de los lóbulos calizinales imbri- cada ; inflorescencia centrípeta, uniforme, rarísima vez irregular- mente compuesta. T. YII. Gracióleas. C. 9 Hojas mas ó menos opuestas, 10. — Hojas siempre alternas, 14. 10. Siempre opuestas, convexas, atravesadas por una membrana linear: flores ciraosas ó mas rara vez solitarias y axilares. T. I. Buddleieas. Bifyddleia. — Cuyas inferiores solas son mas ó me- nos opuestas, 11. -11. Estambres dispuestos por pares aproximados y de anteras biloculares, cuvas celdas son con frecuencia mucronadas v las ma- 1/ t/ yores iguales. T. II. Gerardieas. Cierardia lús]}idida, Mart. — Estambres nunca por pares dispuestos, 12. 12. Labio posterior de la corola yelmi forme ó cóncavo y erguido; inflorescencia centrípeta racimosa. T. III. Eufrasieas. Eufrasia. — Labio posterior nunca con figura de yelmo; inflorescencia centrí- peta racimosa, 13. 13. Hojas inferiores algunas veces solamente opuestas, estambi^es distintos de anteras bi ó uniculares. T. lY. Yeroníceas. — Verónica serpyllifoUa, L. — Hojas inferiores á veces opuestas; estambres no dispuestos por pares, pero aproximados, de anteras diminutas y uniloculares. T . Y. Buchnereas. Budinera. 14. Fasciculadas hacia los nudos ó rarísimas veces opuestas y nunca jamás conjuntas y cuyas florales están conformes con las su- periores ó decurrentes; flores superiores solitarias ó fasciculadas y axilares, mas raras veces cimosas. T. YI. Sibthorbieas. 1). — Inflorescencia centrípeta y racimosa, hojas pecioladas y apretadas por la base. T. Y'II. Bigitáleas. — Digitalis purpiirea. A, Salpiglosídeas. — Brt:nsfelsia, Sw. — 1. Fruto seco y cap- icular; arbusto alampiñado de hojas elípticas cortamente pecioladas y largas de 1" 1|2 á2"; cáliz tubuloso lijeramente dilatado y mas largo que el pedicelo, con los dientes oblongo-lanceolados y obtusi- tos; corola azul cuyo tubo es un poco mas largo que el cáliz, que lo es de T" á 8'". B. hopcana, Benth. — Fruto carnoso, indehiscente ó abriéndose muy tarde, 2. 2. Árbol i to que se eleva á 10' ó á 15' de altura y cuyas hojas elípticas, eliptical-ablongas ú obovales, pecioladas, venosas y largas de 1" 1/2 á 3", con cáliz campanudo 5-d enfado tan largo como el pe- dicelo solitario, con dientes redondos; corola amarillo pálida, lafga 180 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. de 2" á 2" 1/2 y cuyo tubo es 8 á 10 veces tan largo como el cáliz y 3 veces como el limbo, con frecuencia lijeramente arqueado hacia arriba, de lóbulos redondos y enteros; baya amarilla, globosa y cdli 8'" de diámetro. B. Americana, Sw. — B.pubescens, Desc. : C. T. y., n» 72. — Árbol que alcanza hasta 20' y mas de altura, lampiño ó con hojas elípticas ó eliptical-oblongas, obtusitas, cortamente pe- cioladas, venosas, apergaminadas y largas de 3" á 3" 1/2; cáliz cam- paniforme, 5-dentado 1|3 ó 1{4 tan largo como el pedicelo solitario y cuyos dientes son redondos; corola amarilla, de tubo largo de 3" á 2" li2, y 10-12 veces mas que el limbo, rectito y con los lóbulos enteros. B.fallax, Duchass. B. Hemimerídeas. — Angelonia, Bonpl. — Yerba viscoso- pubescente anual y derecha, bastante ramosa y alta de 1' á V 1^2, con hojas oblongo-lineares, puntiagudas, asserraditas, sentadas y de base redonda, largas de 1" á 3" ; primorosas flores moradas en raci- mos terminales flojos, corola de 6'" á 8'" de diámetro, cuyos lóbulos inferiores son oblongos y obtusos, apéndice de la garganta corto; cápsula globosa y loculícida por la base. A. salicarifolia, H. B. — Planta herbácea pareciéndose mucho á la precedente, de la cual di- fiere por ser lampiña, tenerlas hojas lanceoladas ó linear-lanceola- das, puntiagudas, aguzadas por la base, mientras el vértice es entero ó con algunos dientes apartados ; lóbulos inferiores de la corola obovales. A. angustifolia, Benth. — A. salicarifolia, Var. — A, Jamaicensis, Benth. : C. T. V., n° 429. C. Gracióleas. — Herpestis, Gr. — 1. Tallos rastreros sola- mente, ó rastreros y á la vez echando raices, 2. — Tallos derechos ó difusos y nunca rastreros, 3. 2. Yerbecita vivaz de tallo blando, largo de 3" á 4", estendido por el suelo, en donde echa raices, pubescentito y con hojas ovales enteras, palmatinervias, sentadas, largas de 2'" á 4'" y á veces 8'", alampiñadas, tan largas ó mas que el pedicelo bracteado y que sale de su axila; los lóbulos mas anchos del cáliz son ovales, mientras los laterales son lanceolados; corola blanquecina cortamente eserta y de labio superior escotado; celdillas de las anteras oblongas y paralelas; estigma bíñdo, cápsula 4-valvar. H. repens, Cham. y Schl. — Yerbecita de tallos difusos, rastreros y cuya parte inferior echa raices en el suelo, largos de 4" á 6", ramosos y lampiños, con hojas espatuladas ú obovales, subsesiles, sub-enteras, algo suculentas y largas de 3'" á 6'", cuyos nervios son apenas visibles; pedicelos ordinariamente esertos y de vértice bibracteado ; segmentos calizi- nales mas anchos, ovales, mientras los laterales son lanceolados; corola azulita, larga de 6'" y dos veces mas que el cáliz, cuyos lóbu- los son sub-iguales, con el labio superior profundamente bífido; celdillas de las anteras oblongas y paralelas; estigma cabezudo; cápsula 4-valvar. H. Monniera, Kth. : C. T. V., n» 532. 3. Planta herbácea de tallo derecho, lampiño, largo de 8" á 12", anual y con hojas lanceolado-lineares, aguzadas por ambos estre- mos, largas de 12'" á 8'", uninervias y subsesiles y aserraditas por el vértice; flores subsesiles blanquecinas, segmentos mayores del cáliz ovales ú óvalo-largos, mientras los laterales son lanceolados; DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXII. — PERSONADAS. 181 corola cortísima eserta, larga de 2'" j cuyo labio superior es esco- tado ; anteras redondeaditas y de celdillas paralelas; estigma ob- tuso; cápsula 4-valvar. ^. s essüifolia, Benih. — Yerbecita anual, difusa y acostada sobre el suelo, cuyos tallos ramosos y largos de 3" á 8", son lampiños y llevan hojas ovales, obtusitas, aserraditas, uninervias, cortamente pecioladas y largas de 4'" á 10'", frecuente- mente mas cortas que el pedicelo filiforme abracteolado y largo de 3'" á 8'"; segmentos calizinales mayores, ovales ú oval-oblongos, mientras los laterales son lanceolados; corola amarilla, cortamente eserta, larga de 4'" y cuyo labio superior es escotado ; celdas de las anteras redondeaditas y divaricadas; estigma obtuso, cápsula bi- valvar. If. chamadryoides, Kth. — JI. chrysantha, Cham. — H. Cíiheiisis, Poepp. — Lindernia diantliera, Sw. D. SiBTHORBíEAS. — CAPRARIA, L. — Arbustillo de tallo recto, ramoso y alto de 2' á 4', alampiñado, mas ó menos peludo ó pubes- cente, de hojas elíptico-lanceoladas ó eliptical-oblongas, densamente aserradas por arriba de la base; flores blancas cuya corola de 4'" á 5'" de largo lleva 4 estambres y es ordinariamente 2 veces mas larga que el cáliz; cápsula óvalo-subglobosa, igualando al cáliz. C . Mfioray L. : C. T. V., no241. — Mata leñosa de 3' á 4', de tallo y ramos del- gados, lampiña y raramente pubescente, con hojas lanceoladas, agu- zadas, aserraditas por arriba del medio ó sub-enteras; flores blancas, de corola larga de 4'" á 5'", que lleva 5 estambres, cujeas anteras son frecuentemente la mitad mas cortas que los filamentos; cápsula ovoideo-oblonga, igualando al cáliz. C. Mexicana, Moric. ScoPARiA dulcís, L. : C. T. V., 71-610. — 8. tenvÁfoUa, Yar. Familia 69 — CRESCENCIEAS. — Arboles mas ó menos grandes, pero ordinariamente medianos ó raras veces arbustos tre- padores, con hojas simples, alternas ó fasciculadas, sin estípulas, alguna rara vez compuestas, bi ó 3-folioladas ; flores siempre her- mafroditas, solitarias ó mellizas y saliendo del tronco y de los ramos, otras veces corimbosas, formadas de un cáliz inferior monosépalo, al principio muy entero y formando un saco cerrado al rededor de la corola y que por último se revienta desde la base en 2 ó 3 seg- mentos casi iguales ó cerrado en las 3'emas, se queda siempre mas ó menos trunco, pero sin partirse; corola grande campaniforme ir- regular, un poco bilabiada, de estivacion imbricada ó infundibuli- forme, con el tubo elongado, la cual lleva 4 estambres diclínamos, con el rudimento del o** estambre situado entre el par superior, que es el mas largo, ó sin él; anteras bílobas, cuyos lóbulos diverjentes son uniloculares y se revientan lonjitudinal é interiormente, de polen blanco y globoso. Pistilo compuesto de un ovario superior, sentado en un disco amarillo y anular, unilocular y con 4 placentas parietales carnosas, grandes y polispermas, cuyos óvulos son hori- zontales; otras veces es bilocular, su vértice lleva un estilo mas ó menos largo, filiforme y terminado por un estigma bilamelado. Baya mas ó menos gruesa, de casco leñoso, bastante duro y muy resis- tente, de forma y tamaño muy variados, pulposa, cuyas placentas se han soldado entre sí y tienen las semillas anidadas sin simetría nii.gnna, las cuales están comprimidas, achatadas y mas ó menos 182 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. redondeadas, de testa coriácea y lisa, sin endospermo y cuyo em- brión recto tiene cotiledones espesos, redondeaditos y acorazonados y la raicilla espesa y situada cerca del hilo. Tribu 1\ — Crecencieas. A. — Fruto carnoso, leñoso, oval- globoso y unilocular : hojas alternas mas ó menos fasciculadas y simples. Tribu 2. — Tanecieas. B. — Fruto carnoso silicuiforme, bi- plurilocular ; hojas opuestas, mas raramente verticiladas y com- puestas. A. Crescentia, L. — 1. Hojas fasciculadas, 2. — Hojas ordina- riamente no amanojadas, 3. 2. Árbol que se eleva de 15' á 20' ó á 30' de altura, cuyo tronco recto, poco largo y de corteza de color ceniciento lleva muchos ramos largos en forma de varita y mas ó menos horizontales, con hojas espatuladas, subsesiles apergaminadas, largas de 8" á 4'", lam- piñas y lustrosas ; flores bastante grandes colgando de un pedúnculo corto doblado hacia abajo, y bastante grueso, con el cáliz 2-partido, de corola larga de 3" á 2" y de 1" á 1" 1|2 de ancho superiormente, de base plegada transversalmente, color amarillento muy pálido y matizada del mismo color, pero mas subido, con lóbulos dentado- undulosos, fruto mas ó menos grueso_, globoso, oval, elíptico, casi piriforme, etc., de 1' á 2" de diámetro, con el casco leñoso, muy re- sistente. C. cujete, L.: C. T. Y., 75. — Árbol que se parece mucho al precedente, pero no tan coposo y cuyos ramos menos largos y menos horizontales llevan hojas oboval- oblongas ú oval-oblongas, corta- mente pecioladas ó subsesiles, tiesas y esparcidas, largas de 10 á 3", cáliz bipartido; corola desigualmente 5-loba larga de 2" 1|2 y ma- tizada de mas oscuro; fruto ovoideo con una punta obtusa larga de .3" y cu3^o casco es quebradizo. C. cucurhitina, L. 3. Árbol mucho mas grande y mas corpulento que los preceden- tes, cuyo tronco derecho alcanza á 1' ó 2' de diámetro, muy frondoso y cuya corteza es algo teñida de rojizo, y cuyos ramos y ramitas derechos y no horizontales llevan hojas ovales lampiñas, alternas, cortamente pecioladas, largas de 6", sobre 3" de ancho, un poco aguzadas por ambos estremos; flores blancuzcas cuyos estambres algo esertos ó salientes, tienen las anteras amarillas y con el estilo mas largo que ellos; frutos pequeños y simulando como limones, de casco delgado, algo flexible y quebradizo, cuya tripa muy amarga contiene semillas parduscas acorazonado-trílobas. C. latifolia, C. T. V.,858. B. Tancecium, Sw. — Arbusto sarmentoso ó trepador con la mé- dula de los ramos cilindrica; hojuelas membranoso-apergaminadas, ovales ó elípticas, con una punta obtusita, lampiñas y largas de 5" á 3"; flores blancas en corimbos axilares, paucífloros, de cáliz tubu- lar-campani forme, sub-tronco, cuya corola enteramente pubescente y larga de 6" á 8", tiene los lóbulos ovales, obtusitos y undalosos, con 2 anteras esertas y el estilo tan largo como el tulDo; fruto se- mejante á una totumita, solamente mas pequeño, oblongo v largo de 1'. T. jarola, Sw.— 1^. aUiJlomm. De. ; C T. V., 635. -Arbusto no sarmentoso cuyos ramos tienen la médula oblicua ; hojuelas coriá- DIOOTÍLEDÜXEOS. — CLASE XXXIl. — PERSONADAS. 183 ceas, ovales, lampiñas y largas de 3" á 4"; flores en racimos paucí- floros axilares y terminales, de cáliz tubular-campaniforme, sub- tronco ; corola enteramente pubescentita, larga de 6" á 1" , con los lóbulos deltoídeos, puntiagudos y undulosos; 2 anteras esertas; es- tilo tan largo como el tubo. T. crttcigerum, Seem. Bignonia cruci- gera, L. Familia 70. — BIGNONIACEAS. — Vejetales fruticosos mas ó menos trepadores y sarmentosos, provistos con frecuencia de zar- cillos que salen del vértice del raquis; Arbustos y árboles muy grandes y corpulentos, muy raras veces plantas herbáceas, algunas veces matas; de hojas frecuentemente compuestas, ordinariamente opuestas, verticiladas y rarísimas veces alternas , sin estípulas. Flores primorosas, siempre hermafroditas, solitarias, en grupos axilares ó en racimos y panojas terminales, que constan de un cáliz monosépalo, persistente, con 5 divisiones mas ó menos profundas; corola monopétala, ordinariamente campaniforme, de limbo irregu- lar, bastantes veces como bilabiado v otras veces con 5-lóbulos mas Ó menos profundos y desiguales, cuyo tubo ordinariamente corto lleva 4 estambres didínamos insertos en su interior, donde se repara un apéndice que es el rudimento del 5*^ estambre abortado; algunas raras veces hay tres filamentos estériles; anteras cuyas celdillas, ordinariamente distintas son contiguas por la base. Pistilo único formado de un ovario simple, superior y sentado sobre un disco hipójino, bilocular con muchos óvulos distantes del eje é insertos á lo largo de cada márjen de un tabique central placentario: su vértice lleva un estilo simple mas ó menos largo, filiforme y terminado por un estigma bílobo ó bilamelado. El fruto consiste en una cáp^^ula de forma y tamaño vai iados, con dos celdas y que se abre por dos val- vas opuestas á los tabiques, conteniendo muchas semillas ordinaria- mente aladas, comprimidas, sin endospermo y cuyo embrión es recto, con cotiledones grandes, foliáceos y ordinariamente esco- tados. Análisis dicotómica de las trihus y sul)-trilms. 1. Cápsulas siempre biloculares, 2. — Cápsulas ordinariamente uniloculares y á veces biloculares, 5. 2. En las cápsulas maduras el tabique es paralelo, con las valvas llanas ó convexas; dehiscencia haciéndose á lo largo de las márjenes ó marjinícida. T. I. Eubixónieas. A. 3. — En las cápsulas maduras el tabique está opuesto á las valvas llanas ó mas frecuentemente convexas y septíferas, especialmente cuando tiernas y por esa razón la dehiscencia es loculícida. T. II. Catálpeas. 13. 4. 3. Semillas dispuestas en una sola serie por cada lado del tabi- que. S.-T. I. MoNOSTK'TÍDES. — Semillas dispuestas en 2-3-4 se- ries de cada lado del tabique. S.-T. II. Pleostiedes. — CyUstrax antisifilitica, Mart. — Bignonia anUsifilitica, Mart. — B. reridijlora Lood. C. T. Y.. 783. 184 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 4. Semillas dispuestas en algunas series de cada lado del tabique. S.-T. I. Pleostictídes. — Semillas dispuestas según una sola serie, por ambos lados deb disepimento. S.-T. II. Monostictídes. 5. Cápsula bilocular ó unilocular, cujas celdas se abren longitu- dinalmente por el medio; semillas colgantes, aladas ó carnosas por ambos lados; raicilla superior. T. III. Incarvílleas. — Cápsula siempre unilocular, cujas dos valvas llevan las placentas situadas en su medio. T. IV. Eccremocárpeas. A. Monostictídes. — Bignonia, L. — 1. Cáliz cerrado en la jema j por fin tronco ó dentadito, inflorescencia terminal, 2. — Ló- bulos del cáliz desiguales, inflorescencia axilar, 3. 2. Bejucos de tallo muj largo j ramoso, ordinariamente tetrágo- no ó por último anguloso, sub-cilíndrico, lampiño j con las ramitas angulosas; hojuelas 2-3 oval-oblongas ú ovales, aguzadas ó puntia- gudas, enteras j largas de 6" á 3"; flores grandes rosadas, con estrias ó listas, corimbosas, de cáliz trunco, corola campaniforme por arriba de la base, larga de 2" á 3" j asperita; celdas de las an- teras oblongas j rectitas , cápsula larga de 8" á 12", anchamente linear j obtusa por las márjenes, con las valvas lijeramente estria- das, j cujas semillas anchamente redondeadas por los estremos tienen una ala opaca casi tan ancha como la mitad de ellas, que lo son de 1" li2. B. equinocüalis, L. : C. T. Y., 77. 3. Bejuco delgado larguísimo j ramosísimo, lampiño, con las ra- mitas angulosas j por fin cilindricas, que llevan hojas estipuladas, cujas dos hojuelas lustrosas son elípticas ó elíptico-lanceoladas^ festoneado-sub-enteras, puntiaguditas, con los nervio? dispuestos en redecilla j de raquis dilatándose en un zarcillo terminal trífido ó con tres ganchitos. Primorosas flores amarillas fasciculadas j axila- res, de cáliz anchamente campanudo, liso, oblicuamente 5-festonea- do, con los lóbulos anchos y largos de 6'" á 8'", corola lampiña cam- paniforme, de tubo sub-cilíndrico j larga de 1'' 1^2 á 3", celdillas de las anteras oblongas j encorvadas ; cápsula larga de 18" á 12", casi linear, obtusa por los bordes, lijeramente estriada, cujas semillas numerosísimas, linear-oblongas, largas de 2'", sobre 12'" á 15"' de ancho, tienen una ala transparente por los estremos, mucho mas anchos que su parte media. B . unguis. L. B. G. 1. Tecoma, Juss. I. Limbo calizinal desigual; tubo de la co- rola gradualmente dilatado; cápsula de valvas enteras; hojas diji- tadas ó simples, 3, — Limbo calizinal con 5 dientes iguales; tubo de la corola ventricoso por encima de la base ; valvas de la cápsula por fin bipartidas; hojas imparipinadas opuestas, 2. 2. Arbusto de 4' á 10' de altura, muj ramoso, lampiño, de hojas imparipinadas, con 2 á 5 pares de hojuelas oblongo-lanceoladas, aguzadas, aserradas j cuja anchura varia mucho ; primorosas flores amarillas racimosas, de cáliz la mitad mas corto que la parte estre- cha del tubo campanudo de la corola larga de 2" á 1" 1[2; estam- bres inclusos con las celdillas de las anteras lanceoladas j rectas; cápsula linear, aguzada sub-comprimida vlarira de 8" á4". T. stans, Jn : C. T. V., 364. L. Hojas escamosas cujas escamitas están ordinariamente dis- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE r-CXXII. — PERSONADAS. 185 tantes; flores rosadas ó blancas, 5. — Hojas sin escamas; ñores amarillas, 4. 4. Árbol grande, frondoso y bastante corpulento, de tronco recto j que se eleva á 40' ó 50' de altura y aun mas, lampiño y de hojas apergaminadas formadas de 4, 5 ó 6 hojuelas oblongo-lanceoladas, aguzadas, aserradas por encima de la base, todas pecioladas, cuyas terminales son largas de 8" á 6" con el peciolulode 20'" á 10'", mien- tras las inferiores lo son solamente de 3" á 2", con el peciolulo de 6"' á 4'"; flores en corimbos umbeliformes y saliendo antes que las hojas, de cáliz campanudo polvoriento 1^4 ó Ifí mas corto que la corola larga de 2" á 2" li2 y lampiña, cortamente 5-loba con los ló- bulos desiguales y deltoídeos; estambres profundamente inclusos con las celdas de las anteras oblongas y encorvadas por el ápice, T. serratifolia, Don. — Bignonia serratifolia, Y. 5. Árbol grande bastante frondoso y corpulento, de madera y corteza blancuzcas, con hojas tiesas frecuentemente de cara inferior blanquecina, formadas de 3-5-8 hojuelas lanceolado-oblongas ó 11- near-oblongas, obtusitas, enteras todas pecioluladas, largas de 3" á 1" y con peciolulos de 6'" á 2'"; flores amarillentas en corimbos paucífloros dispuestas, de cáliz campanudo, escamoso, con los labios mucronados, cuyo superior es frecuentemente mas largo que el in- ferior bífido, 1^4 ó 1[6 mas corto que la corola lampiña esterior- mente y pubescentita interiormente, larga de 2" 1^2 á 2", con los estambres profundamente inclusos y cuyas celdillas de las anteras oblongo-lineares son rectas; cápsula linear sub-comprimida y larga de 6" á 8", con las valvas lisas y sin estrias y conteniendo muchas semillas tan anchas como su ala oblonga, larga de 4"'. T. leucoxyl- lon, Mart.: C. T. V., 716. — Árbol bastante alto y grande, corpu- lento y frondoso, pero no tanto como el anterior, lampiño y de cor- teza blancuzca, con hojas tiesas diminutamente escamosas, formadas de 3-5-7 hojuelas eliptical-oblongas, elípticas ó elíptico-lanceola- das, obtusitas enteras y todas pecioluladas largas de 3"' á 6'" y cu- yos peciolulos de las del medio lo son de 12"' á 20'", mientras los de las inferiores de 3'" á 6"' solamente; flores blancas ó rosado algo moraduzcas en corimbos paucífloros, de cáliz campanudo, escamoso, con los labios redondeados cuyo inferior es bífido, 1|2 ó 1[7 mas corto que la corola larga de 3" á 2" li2, lampiña esteriormente y pubescentita interiormente con los estambres profundamente inclu- sos, cuyas celdas de las anteras son oblongo-lineares y rectitas ; cápsula linear, elongada, sub-cilíndrica y larga de 11" á 8", nos- otros la hemos hallado algo comprimida, aguzada por ambos estre- mos, algo ventricosa y convexa en la parte media, larga de 2" á 3" sobre 1" de ancho por el medio, con las valvas provistas de 3 es- trias salientes, conteniendo muchas semillas tan anchas como su ala oblonga y larga de b"' . T. pentaphylla, C. T. V., 727. G. II. Catalpa longisiliqua: Cham. : C. T. Y., 78. G. III. Jacaranda cceridea, Gr. — Bignonia cosrulea, L. — B. B (iiliQj'Yíicnsis De Familia 71. — PEDALIÁCEAS, PEDALINEAS 6 SESÁ- MEAS. — Plantas herbáceas anuales ó j'^^rennes, algunas veces 18(J DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. con raiz perpendicular carnosa y bastante gruesa, frecuentemente polvorientas, mas ó menos glaucas ó velludas y mas ó menos visco- sas, ramo>as, con hojas simples mas ó menos grandes y pecioladas, lampiñas ó las mas veces velludas ó pubescentes, sin estípulas, opuestas ó las superiores alternas; flores completas hermafroditas, mas frecuentemente axilares y solitarias y raras veces en espigas ó racimos axilares ó terminales, que constan de un cáliz mono^épalo con 5 divisiones mas ó menos profundas, iguales; corola mas ó me- nos grande, monopétala, hipójina, irregular, con el tubo mas ó me- nos largo, cilindrico ó giboso y de garganta ventruda con el limbo 5-lobo, frecuentemente bilabiado^ cuyos lóbulos casi redondos son algunas veces valvados en la estivacion, sostenida por un disco hi- pójino, carnoso y glanduloso, y cuyo tubo lleva 4 estambres didína- mos, cuyas anteras biloculares y grandes están pegadas en un co- nectivo articulado sobre el filamento y prolongado mas allá de ellas; siempre el 5** estambre es estéril ó rudimentario ; pistilo único for- mado de un ovario ceñido de un disco glanduloso hipójino, con 1, 8 y ordinariamente 2 ó 4 celdillas, con pocos ó con muchos óvulos, que lleva en su vértice un estilo único que se termina por un es- tigma dividido en 2 ó 4 lóbulos ó bilamelado ; fruto capsular y dehiscente polispefmo, ó drupáceo-nucamentoso indehiscente ó casi indehiscente, compuesto de 5 carpelillos en el estado normal y por causa de aborto reducidos ordinariamente á dos, tres ó cuatro, mu- chas veces con valvas encorvadas hacia adentro y por consiguiente con las verdaderas celdillas bipartidas , cuyas semillas, en número variado y uniseriadas, tienen alas ó están sin ellas, sin endospormo y cuyo embrión recto tiene los cotiledones planos ó plano-convexos y la raicilla mas corta que ellos. Tribu la. EusESÁMEAS. Plantas siempre anuales, de fruto capsular dehiscente y de consistencia membranosa, cuyas semillas nume- rosísimas y oleosas son frecuentemente aladas ó están desprovibtas de ellas. — Sesamícm oriéntale, L.: C.T. Y., 637. — T. II. Eupeda- LÍNEAS. Plantas anuales ó perennes, cuyo fruto indehiscente ú os- curamente dehiscente por el ápice y nuncamentoso-drupáceo se termina frecuentemente por un ápice ganchoso, bífido, muy pun- zante y muy fuerte; semillas solitarias ó escasas en las celdas, nunca aladas, poco ó nada oleosas. — Mo.rtynia diandra, Glox.: C. T. V., 638. — Craniolaria annua, L.: C. T. V., 506. Familia 72. — ACANTÁCEAS. — Plantas herbáceas anuales ó perennes, matas, arbustos y raras veces arbolitos, cuyas raices son raramente tuberculosas, con hojas simples, enteras, mas ó menos festoneadas y ondeadas, mas ó menos dentadas y hasta lobadas al- gunas raras veces, pecioladas y opuestas, cuyo par es frecuente- mente desigual ; las partes herbáceas están ordinariamente provis- tas de líneas de pelo adnato; sin estípulas; flores ordinariamente sostenidas por una bráctea, ó mejor saliendo de su axila, solitarias mellizas, en espigas ó en panojas terminales y compuestas de un cáliz monosépalo persistente con 4 ó con 5 divisiones desiguales re- emplazadas á veces por igual número de dientes ; corola monopé- tala, comunmente irregular, que poreoe mas ú monos bilabiada y DICOTÍLEDÓXEOS. — CLASE XXXIl. PERSONADAS. 187 cuyo limbo está dividido en 4 ó en 5 lóbulos, de tubo mas ó menos largo, que lleva 2 0 4 estambres didínamos insertos en su interior é inserta ella en un disco hipójino ; el pistilo único se compone de un ovario simple mas ó menos larguito fusiforme, con 4 caras poco pro- nunciadas, superior, bilocular, con óvulos ordinariamente en nú- mero definido, dispuestos á lo largo del eje y ascendentes, cuyo vértice lleva un estilo sencillo mas ó menos largo terminado por dos estigmas simples ó por uno bílobo. El fruto consiste en una cápsula de forma muy variada, mas ó menos larga, pero ordinariamente fusiforme y con 4 caras mas ó menos pronunciadas, elásticamente loculícida; se abre pues á favor de 2 valvas septíferas y lonjitudi- nalmente desde el vértice hasta la base; los tabiques están formados por sus propios bordes y por consiguiente son bipartidos, fre- cuentemente con apéndices ganchosos á lo largo de la márjen ; con- tiene algunas senaillas pegadas por los apéndices ó retináculos, destituidas de endospermo y cuyo embrión dirije la radícula hacia el hilo. Análisis dicotómica de los órd.enes y de las tribus. 1. Semillas no sostenidas por retináculos. Ord. 1°. Axec:matá- CEAS.2. — Semillas sostenidas por retináculos ganchosos, disepi- miento de las cápsulas bipartido. Ord. II. Ecmatacánteas, 3. 2. Plantas trepadoras cuya cápsula contiene pocas semillas grue- sas, con una especie de cúpula pegada por súbase en lugar de los retináculos; placenta coherente en el eje.T. I. Tumbergieas. Tum- hergia fragrans, Roxb. — Cápsula con muchas semillas pequeñas nacidas sobre un cordoncillo en forma de pezoncito. T. II. Nelso- X1EAS. 3. Cáliz quinqueñdo ó 5-partido, 5. — Cáliz 4-partido, 4. 4. Con lacinias desiguales ó bilabiado; corola infundibuliforme ó liilabiada, de tubo cortísimo y con las fauces ordinariamente prolon- gadas; estambres 4 insertos en el ápice del tubo, didínamos, de los que un par es cortísimo, ó por aborto dos solos, de anteras con las celdillas paralelas: cápsula tetrasperma por la base. T. I. Barle- ETEAS. Barleria lútea, L. : C T. V., 361. — Con las lacinias desi- guales pero no bilabiado; corola unilabiada con el tubo cartilajinoso; 4 estambres didínamos con anteras uniloculares; cápsula tetrasperma por la base. T. II. Acanteas. Acanthns. 5. Quinqué fido, 1. — Siempre 5-partido, 6. 6. Regular, corola Ijilabiada ó boquiabierta, pocas veces casi re- gular ó embudada; estambres 4 casi iguales y con anteras estrechas y uniloculares; cápsula tetrasperma desde la base ó en el medio, pocas veces en el medio di-hexasperma. T. III. Afelándreas. — Profundamente 4 partido y regular; corola bilabiada con los labios de iirual forma ; estambres raras veces 4-didínamos v de ordinario dos solamente, con anteras comunmente biloculares y de celdillas paralelas ó algunas veces uniloculares, y entonces de celdas sobre- puestas; cápsula tetrasperma en el medio con el tabique en algunos casos separable de las valvas y olástií-amente levantado. T. IV. Dr- CLII'TÉREAS. 188 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 7. Cáliz no siempre quinqué ficlo, pero alguna vez por pequenez ó falta de la lacinia dorsal cuadrífido ó casi cuadrífido, 8. — Cáliz siempre mas ó menos profundamente 5-fido, 10. 8. Corola bilabiada ó boquiabierta, raras veces embudada con el limbo 4-fido casi igual ; estambres nacidos de la base del tubo, pocas veces 4-didínamos v ordinariamente dos solamente, con anteras bi- loculares cuyas celdillas paralelas ó mas frecuentemente separadas por el conectivo, son mochas ó espolonadas por la base, después se vuelven uniloculares por causa de aborto ; cápsula mas estrecha comprimida y estéril desde la base hasta casi el medio, y desde el medio dipleisperma. T. Y. Gandarijseas. A. — Corola mas ó me- nos bilal)iada, 9. 9. Corola nunca bilabiada, pero boquiabierta ; estambres 4-didí- namos y raras veces dos fértiles solamente, con anteras de celdillas paralelas ; cápsula estrecha ; polisperma desde la base, en un solo género oligosperma desde el medio, aunque sin la base contraída. T. VI. HiGKOFÍLEAS. — HygTO])liylla hispida. C T. V., 500. 10. Corola bien bilabiada, 11. — Corola casi regular no mani- fiestamente bilabiada, tubulosa, infundibuliforme ó casi campani- forme, con tubo mas ó menos pronunciado ; estambres 4-didínamos y sin embargo casi iguales, aveces 2 solamente, con anteras de cel- dillas paralelas; cápsula di-tetra-polisperma, casi siempre estéril y mas angosta en algún espacio por la base. T. YII. Ruelíeas. B. 11. Casi bilabiada con labio superior estrecho y tubo largo ó casi asalvillada con limbo regular; estambres 2 perfectos é insertos en el ápice del tubo, con anteras biloculares de celdas paralelas; cáp- sula desde la base hasta el medio ó mas allá estrecha, deprimida y estéril. T. YIII. Erantémeas. — Justicia eustacliiana. — Bila- biada ó boquiabierta ; estambres dos con anteras biloculares cuya celdilla inferior es barbuda ó lanosa y después obliterada por la lana ; cápsula deprimida y polisperma desde la base. T. IX. Andro- grafídeas. Andró gr a^liis 2^aniculata, Nees.: C. T. Y., 254 bis. A. Gandarüseas. — Dianthera', As. Gr. 1. Tubo de la corola elongado; labios aproximados; el superior es sub-entero ó escotado, mientras el inferior es 3-festoneado ; celdillas de las anteras sepa- radas por el conectivo ancho ; plantas herbáceas, cuyas flores color carmesí están en racimos terminales compuestas de brazos racemi- formes ó contraidos; brácteas pequeñas. D. segunda, Gr. — Labio inferior de la corola estendido y anchamente 3-lobo ; flores espiga- das ó axilares con brácteas pequeñas ; plantas herbáceas ó sufruti- cosas bajitas, 2. 2. Tallo delgado alto de T á2', herbáceo ó sub-frutecente, lam- piño, frecuentemente con una línea de pelo, pubescentito por la su- midad; hojas lanceolado- aguzadas, ú oblongo-lanceoladas. largas de 4" á 1", sésiles; flores rosaditas con la garganta de la corola pintadita ó azulitas, distantes en espigas ramosas, elongadas y or- dinariamente unilaterales y terminales, de cáliz con 5 segmentos pequeños, linear-aguzados 1{4 ó 1|6 mas cortos que la corola larga de 4-5'", bilabiada hasta el l^l de sulonjitud, cuyo labio superior oval y entero escede los estambres, cuyas celdillas de las anteras DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXIl. PEESONADAS. 189 ovoideas y oblicuas son separadas por el conectivo contraído ó pe- queño. D. jiectoralis, Mar.: C. T. V., 428. — Yerba alampiñada de tallo rastrero y delgadito largo de 6" algo mas ó menos, con hojas del toideo- ovales, puntiagudas ú obtusitas y largas de 6 á 3'"; flores pocas distantes en una espiga simple y filiforme, unilateral, de cáliz con los segmentos linear-aguzados \\A. mas corto que la corola larga de 3-4'" blanca con pintas rojas en la boca, bilabiada hasta el 1{4 y cuyo labio superior es escotado; celdillas de las anteras ovoideas y oblicuamente diverj entes, de las cuales una está mas alta. D. rep- tans, Gr. — Ry tino glosa reptans, Nees. k.T>Kk.TOY)j^ justicia, C. T. V., 294. B. RüELÍEAS. RuELLiA, L. 1. Cáliz profundamente 5-fido, 2. — Cáliz 5-partido ; cápsula sub-cilíndrica con 6-24 semillas situadas desde casi la base ; retináculos obtusitos por el vértice ; flores late- rales acompañadas de dos brácteas en la base y dispuestas en cimas laterales ó axilares, 4. 2. Cápsula comprimida con 4 á 8 semillas situadas por arriba de la base sólida, con retináculos dentaditos por el vértice ; flores axi- lares, sentadas y sin brácteas, 3. — Cápsula sub-comprimida con 16-4 ó raras veces 2 semillas , de retináculos subulados ; cimas abiertas, axilares y cuyas flores laterales están acompañadas de dos brácteas por la base ; planta fruticosa como de 3" á 5" de alto y de ramos abejucados, glandulosa; con hojas óvalo-lanceoladas, acuña- das y pecioladas; flores azules en cimas apanojadas, de cáliz con segmentos linear-filiformes acompañado de brácteas lanceoladas ; tubo de la corola largo de \" , hinchado por el medio; cápsula oblongo-linear, lateralmente sub-comprimida, con 8-12 semillas lisas situadas por arriba de la base. R. paniculata, L.: C. T. V., 500. 3.. Planta herbácea ó sufruticosa, alta de V á 2' peluda ó alampi- ñada y de tallo derecho ó poco ramoso, con hojas lanceolado-oblon- gas, lanceoladas ú ovales, subsesiles; flores purpúreas 1 ó 2y axila- res; de cáliz largo de 4-5'", con los segmentos linear-aguzados; corola larga de Vé. 1 1|2" contubo ensanchado por el medio; cápsula ovoidea, pubescente, con 4 semillas por arriba de la base. R. gemi- niflora, Kth.: C. T. V., 476-786. — Variedades: Hojas lanceoladas y largas de 1" á 1" 1^2 ; pelo estendido. Depteracanthus aiigustifo- Uiis, Ns. — Vellito corto, hojas oblongo -lanceoladas y largas de 1". Bipt. cancscens. 4. Planta herbácea, de raiz amanojado-tuberculosa, alta de V á 2', cuyo tallo es mas ó menos recto y á veces algo estendido por el suelo, con la sumidad ascendente, ramoso, alampiñado y glanduloso superiormente; con hojas elípticas, obtusitas, acuñadas por la base y pecioladas. Flores azuladas en cimas dicótomas, y frecuentemente en panojas abiertas, de cáliz largo de 5-8'", con los segmentos li- near-filiformes y mucho mas largos que las brácteas lineares ; corola larga como de 2" á 2" lf2, de tubo ensanchado por debajo del me- dio, parte estrecha de la córala mas corta que el cáliz ; cápsula lan- ceolado-oblonga. pubescente, larga de 6-12'" y con 10 á 12 semillas. R. tuberosa, L.: C. T. V., 474, 190 DIVISIÓN SEGUNDA. FAXERÓCtAMOS. CLASE XXXIII. — SELAJIXOÍDEAS. Familia 73. — MIOPORaCF AS. — Matas, frútices, arbustos j raras veces arljolitos con hojas alternas y á veces opuestas, simples, enteras ó dentadas, casi siempre seml-radas de glandulitas resinosas, sin estípulas; flores axilares solitarias Mancas ó amarillas, á veces rojas, formadas de un cáliz persistente 5-partido ó raramente 5-fido, con los lóbulos á veces imbricados por la base y de estivacion quin- cuncial ; corola monopétala 5-loba, casi regular ó variamente bila- biada, con un lóbulo siempre delantero, colocado por dentro en la estivacion; estambres 4 ordinariamente salientes, didínamos, sin vestijios del quinto superior, cuyos dos inferiores son mas largos y todos insertos en la l)ase de la corola, de anteras scmi-lunadas j os- cilantes, cuyas dos celdillas, confundidas en una, se abren por una sola hendidura. Pistilo con ovario sentado sobre un receptáculo car- noso, sin nectario alguno, libre, bi ó multilocuiar, con las celdillas frecuentemente sub-divididas por la márjen de las hojas carpilares. y con dos huevecillos pendientes y anátropos, terminado por uii es- tilo simple ó rara vez bífido. Drupa pequeña abayada ó casi sin jugo. con el hueso ordinariamente bilocular, muchas veces completa ó incompletamente 4-locular y 8-4-2-espermo, cuyas semillas inver- sas y oblongas están provistas de un endospermo carnoso, con el embrión rollizo, cuyos cotiledones son plano-convexos y la raicilla supera. — Bontia da'phnoides, L.: C. T. V., 634. Familia "74. -- JAZMÍNEAS. — Arbustos y á veces árboles bastante grandes y corpulentos; pero mas á menudo pequeños, de hojas simples y algunas veces tan lobuladas y tan partidas que á primera vista parecen completas, como lo son realmente algunas raras veces, pecioladas, opuestas de ordinario y alguna que otra vez alternas; cuyas flores casi siempre hermafroditas y bastantes veces polígamas están dispuestas en grupos axilares en racimos y en tirsos terminales, constan de un cáliz monosépalo persistente con la base turbinada y raras veces formado de 4 sépalos; corola monopétala, regular ó irregular, cuyo tubo lleva pegados dos estambres y rarísi- mente 4; algunas veces está compuesta de 2 ó de 4 pétalos, otras veces suele faltar enteramente ; pistilo formado de un ovario único, supero bilocular, monospermo , cuyo vértice sobrelleva un estilo simple y raras veces bífido, terminado por un estigma bílobo. El fruto consiste en una cápsula que se abre por dos valvas, otras veces en una baya ó una drupa con una ó dos celdas conteniendo de 1 á 4 semillas ó huesecitos con un endospermo carnoso ó duro que contie- ne el embrión. Jasminiim offcinalis, L. — Mongorimn so/mlox, L.: C.T.Y.,430. CLASE XXXIV. - YERBEXÍXEAS. Familia 75. — VERBENÁCEAS. — Plantas herbáceas, ma- tas, frútices, arbustos y algunas raras veces árboles bastante gran- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXIV. — VEKBENÍNEAS. 191 des, cuyas hojas, ordinariamente simples y alguna rara vez com- puestas, enteras, festoneadas ó dentadas y pocioladas, son opuestas ó verticiladas, sin estípulas. Flores siempre hermafroditas, de inflo- rescencia centrípeta y en espigas, racimos, cimas ó cabezas axilares ó terminales, las cuales constan de un cáliz monosépalo, tubulado, mas veces persistente 4-5 -dentado ó lobulado; corola monopétala mas ó menos irregular con 4-5 lóbulos iguales ó desiguales, cuyo tubo lleva 4 estambres didínamos pegados en su interior, rarísimas veces ¡íon dos y mas rara vez todavía 6 ; de limbo ordinariamente bilabiado y de estivacion imbricada ; pistilo único formado de un ovario simple, supero, 8-4-2 y rara vez 1-locular, con 1-2 óvulos en cada celdilla y cuyo ápice lleva un estilo sencillo mas ó menos largo y filiforme que se termina en un estigma simple ó bílobo. El fruto consiste en una baya ó en una drupa mas ó menos seca, y en ese último caso reventándose ordinariamente en nuececitas ó hueseci- tos en número de 2 ó de 4, conteniendo cada uno una semilla er- guida ; otras veces es un pericarpio á veces bi ó trílobo simulando así aquenios ó semillas desnudas cubiertas por el cáliz persistente ; semillas sin endospermoy de embrión recto. Análisis dicotómica de las tribus y sub-tribus, 1. Óvulos erguidos y derechos desde la base de la celdilla y aná- tropos ; inflorescencia indefinida simple y centrípeta. T. I. Verbe- neas, 3. — Huevecillos pendientes desde el ápice del eje, anfítropos y apareados en cada celdilla. Cápsula coriácea indehiscente y al fin quebrantándose en lagerminacion ó druputamasómenoscarnosita,2. 2. Inflorescencia centrípeta en cabezuela ó espiga. Flores con brácteas ó bracteillas hermaneadas, escamiformes y empizarradas; cáliz 5-fido; corola casi regular 4-fida. T. II. Aviceníeas. E. — Huevecillos insertos sobre la base de la celdilla en el ángulo central, pendientes, anfítropos ó casi anátropos; fruto drupáceo; inflorescen- cia definida di-tricótomo-cimosa. T. III. Viteas. D. 3. Fruto drupáceo mas ó menos carnosito, 4. — Fruto capsular, 8. 4. Flores nunca en capítulos ó cabezuelas, 5. — Flores en capítu- los ó en espigas mas ó menos bracteadas, de cáliz cortamente tubu- loso membranáceo, de corola tubulosa sub-hipocrateriforme, de limbo oblicuo sub-bilabiado; drupa dipirinácea, de la que cada hueso es unilocular; frútices. S.-T. I. Lantáneas. B. 5. Fruto drupáceo bi ó'4 pirenáceo ó con 2 ó 4 huesecitos, (3. — Fruto drupáceo sub-carnoso, 7. 6. Flores en racimos flojos de cáliz tubuloso, ciatiforme, cuyo fructífero es acrescente, de corola campanuda ó hipocrateritorme ; fruto cuyos huesecitos ó pirenas son biloculares ; frútices ó arbus- tos. S. T II. Durante AS. C. 7. Flores en racimos flojos de cáliz sub-bilabiado y de corola uni- labiada. S.-T. III. Monochíleas. — Flores en racimos axilares, paucífloros, de cáliz tubuloso y de corola infundibuliíorme ; yerbas y frútices tropicales. S.-T. I Y. Casselíeas. 192 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 8. Flores en racimos flojos de cáliz ciatiforme 5-dentado y pe- queño, envuelto en otro cáliz mayor, esterior 5-partido, colorido y acrecenté; aquenio 2 ó 1-locular, monospermo por aborto. S.-T. V. PÉTREAS. — Fruto separable por último en carpelos encerrados en el cáliz persistente ; flores en cabezuelas, en espigas ó racimos, de cáliz campanudo, con la corola hipocrateriforme, tubulosa, cuyo limbo oblicuo es sub-bilabiado ó hendido. T. VI. Euverbéneas. A. A. Stachytarpha Y. — Vejetales anuales sufruticósos, 2. — Vejetales perennes casi leñosos ó arbustillos, 3. 2. Alampiñado y cuyo tallo mas ó menos ramoso se eleva á 2 y hasta 4' de altura, con hojas ovales, bien aserradas, aguzadas en peciolo, de cara superior verde oscuro, lampiña y lustrosa y algo áspera, mientras la inferior, mas pálida, tiene algunas nervaduras peluditas; flores azules en espigas cilindricas delgadas,, largas de 8 á 10" y con surcos menos hondos que el diámetro del eje espeso de 2'" por la base ; cáliz largo de 2-3'", comprimido y bífido, conte- nido en cavidades correspondientes del eje ; acompañado por brác- teas oblongo-lanceoladas, aguzado -aristadas y estriadas; corola de tubo bastante largo y arqueado, con el limbo como de 4'" de diáme- tro. S. Jamaicensis, Y.: C. T. Y., 492. — Yelludo y alto de 1' á 2', ramoso y con hojas ovales, ú ovaloblongas, aserradas ó festoneadas, acuñadas por la base y casi sentadas ; flores azules en espigas elon- gadas, cilindricas, casi sésiles, un poco mas cortas que las del ante- rior y de vértice arqueado, con los surcos mas estrechos que el eje; brácteas todas herbáceas y membranosas , lanceolado-oblongas, aguzado-aristadas, estriadas é iguales con el cáliz 4-dentado, pe- ludo y comprimido ; corola algo mas corta que en la anterior espe- cie. S. strigosa, Y. 3. Mata ó arbustillo de tallos dicótomos y como de 3 á 4' de alto, bastante ramosos, lanudos ó pubescentes y blanquecinos, con hojas ovales, obtusas, aguzadas y aserradas, de base entera que va estre- chándose hasta volverse peciolo muy corto, alampiñadas, lanudas ó pubescentes; flores en espigas delgadas, rectas, densífloras, algo lanudas, con brácteas linear-aguzadas, subulado-setáceas, de már- jen escariosa inferiormente, iguales al cáliz ó mas cortas que él, cuyalonjitud es de 2'", comprimido con 4 nervios y 4 dientes. S, Cayennensis, Y. B. G. I. LiPPiA, L. 1. Plantas anuales ó sufruticosas, 2. — Yejetales fruticosos ó arbustillos derechos ó difusos y con glándulas aromáti- cas, 4. 2. Yerba desparramada con los pedúnculos cortos, 3. — Planta herbácea 6 sufruticosa y arraigante, pubescente, y con hojas espa- tuladas, aserradas por el vértice, alampiñadas ; cabezuelas ovoideas y por fin oblongas ; pedúnculos axilares, simples, de ordinario mas largos que las hojas; brácteas óvalo-redonditas acuñadas por la base, mucronadas ú obtusas, un poco mas cortas que la corola blan- ca ; cáliz bifido superiormente y bipartido inferiormente, un poco mas corto que el tubo de la corola. L. nodiflora, Rich. 3. Desparramada y tendida, sin glándulas, pubescente, con hojas romboideo-ovales, bien aserradas, largas de 1" á 1" 1x1: pedúnculos DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXÍV. — VERBEKÍNEAS. 193 axilares, fasciculados ó solitarios, casi tan largos como la cabezuela cónico-oblonga y obtusa, ordinariamente mas cortos que el peciolo; brácteas cuneiformes y cuspidadas, cuya arista escede algo la corola pequeña y rosada ; cáliz diminuto 2 -dentado, casi li2 de la corola. L. hetuUfolia, Kth. 4. Hojas ovales ú óvalo-oblongas sobre ramas con forma de varita y pelierizadito-pubescentes, aserraditas, ásperas, escabfoso-pelie- rizaditas por la cara superior, mientras que la inferior es ordina- riamente peludo-tomentosa , con dientes de ordinario obtusitos ; ñores en cabezas de 6'" de diámetro, sub-giobosas y por último cor- tamente oblongas, cuyos pedúnculos 1 ó 2 axilares son tan largos como el peciolo ó mas cortos que las hojas, con brácteas ovales, puntiaguditas ó puntiagudas, un poco mas cortas que la corola mo- rada, cáliz pequeño bífido lp3 mas corto que el tubo de la corola, el cual tiene 4'" de largo. Z. geminata, Kth. : C. T. Y., 244. — Con las dos variedades siguientes : 1. Hojas puntiagudas largas de 2 á 3"; pedúnculos largos de 6 á 12'" y ordinariamente mucho mas largos que los peciolos; brácteas puntiagudas. L. locliartii. Lantana loc- kartii, Don. — 2. Hojas obtusas largas de 6 á 12''' ; pedúnculos mas largos que los peciolos y largos de 6 á 10'" : brácteas anchas y mucro- nadas. L. micrrypliylla, Yarg. Ladtana líppioides, H. A. — Ar- busto de 5 á 6' de alto, estrigoso y con las ramas en forma de varitas y con hojas lanceolado-lineares, aserradas, rugosas ó plegaditas según sus venas principales, peludo-pubescentes interiormente, con los dientes mucronados y largas de 2" 1{2 á 1" : ñores azuladitas ó rosadas, en capitules globosos y por fin oblongos y de 4'" de diáme- tro, con los pedúnculos largos, axilares y casi iguales á las hojas; cuyas brácteas redondito-mucronadas son mas cortas que la corola larga de 2'"; cáliz comprimido, bidentado y mitad mas corto que el tubo de la corola. L. sf^dchadi folia, Kth. Verbena st^echadi- folia, L. Zapania stcechadifoUa, Pers. G. II. Lantaxa, L. ■ — 1. Celdillas del huesecito apartadas y con una cavidad entre ellas ó intermedia; arbustos de ordinario aguijo nosos, 2. — Celdillas del hueso contiguas: arbustitos iner- mes, 3. 2. Arbusto muy ramoso que se eleva como de 6 á 10' de altura, con hojas ovales ú oval-oblojigas, puntiagudas, aserradas, de cara superior pelierizada, mientras la inferior es pubescente ó alampi- ñada, largas de 2 á 4" y casi tanto como los pedúnculos, pecioladas; ñores amarillas cuyo color se vuelve rojizo, en capitules un poco achatados y sin involucro, pero cuyas brácteas lanceoladas son mi- tad mas cortas que el tubo de la corola, largo de 3'"; drupas lustro- sas y negras de 3 á 2'" de diámetro. L. cámara, L. : C. T. Y., 242. — Arbusto que parece mucho al anterior, pero algo mas bajito, de ho- jas ovales, puntiagudas, aserradas, largas de 1" á 3" 1[2. pecioladas y de cara superior pelitiesa, mientras la inferior es pubescente ó aiampiñada, ordinariamente mas corta que los pedúnculos largos; flores amarillas cuyo color se -vuelve por último anaranjado, en ca- bezas achataditas y sin involucro, pero sí con brácteas linear-agu- zadas, de ordinario 1^3 del tubo de la corola, que es larga de 4'"; TOMO JI 1 3 194 DIVISIÓN SEGU^DA. FANERÓGAMOS. drupa lustrosa, negra y de 2'" de diámetro. L. crocea, Jacq. : C. T. V.,243. 3. Capítulos sub-globosos ó achataditos, 4. ■— Cabezuelas por fin mas largas que anchas, 6. 4. Cabezuelas sub-giobosas con las drupitas de 1'" de diámetro, 5. — Capítulos al principio achataditos, con las brácteas del involucro anchamente óvalo -deltoídeas j mas cortas que el tubo de la corola, largo de 3 á %'" . Hojas ovales obtusitas, festoneadas , pubescentes y ordinariamente mas cortas que los pedúnculos, largas de 1 á 2" y pecioladas. L. reticiUata, Pers. 5. Brácteas esteriores del involucro anchamente ovales y tan largas como las flores, de color lila, con la garganta de la corola amarilla, mientras las interiores óvalo-redonditas son 1|2 del tubo de la corola, el cual tiene 1 1|2 á 2'" de largo. Hojas pequeñas ova- les, obtusas, festoneadas, pubescentes, tan largas ó mas cortas que los pedúnculos y que tienen solamente 12'" á 6'" y hasta 3'" de largo. L. involucrata, L. : C. T. V., 242. — Brácteas esteriores del involu- cro óvalo-lanceoladas, tan largas como las flores, de color lila pá- lido, mientras las interiores aovadas son la mitad del tubo de la corola, el cual es largo do %'" . L. odorata^ L. Z. recta, Ait. L.^edun- cularis, Anders. 6. Hojas mas ó menos ovales ó aovadas, "7. — Hojas elípticas ó eliptical-oblongas, puntiagudas, de base acuñada y aguzada, festo- neadas, de cara inferior pelierizadita ó peludo-pubescente, fre- cuentemente verticiladas, tan ú ordinariamente mas largas que los pedúnculos y de 5 á 2" de largo; cabezas ovoídeo-globosas y por fin oblongas, sin involucro, pero sí con brácteas subuladas mas cortas que el tubo de la corola rosada, teñida de lila ó blanca, con las fau- ces amarillas ó iguales co3. él; drupa de V" lf2 de diámetro. L. tri- foliata, L. X. anmia, L. 7. Hojas ovales ú oval-redonditas, obtusas, redondeadas por ar- riba de la base acuñada, festoneadas, peludas inferiormente, largas como los pedúnculos ó mas cortas que ellos, largas de 1 á 2" ; capí- tulos sub-globosos, y por último cortamente oblongas, sin involucro y cuyas brácteas aovadas ó aovado-redondítas, mucronadas ó cus- pidadas son mas cortas que el tubo de la corola rosada ó raras veces blanca y larga de 2'". X. radiola, Sw. . C. CiTAREXYLUM, L. — 1. Florcs subsesilcs, 2. — Flores cuyos pedicelos son mas largos ó tanto como las brácteas. 3. 2. Árbol de 20 á 60' de altura, muy ramoso , de tronco bastante recto, cuya epidermis espesa se desprende en lacinias, color ceni- ciento, de ramitas siempre con 4 caras, cuyas hojas apergaminadas y por fin tiesas, lustrosas, elíptical-oblongas ó elípticas, ordinaria- mente obtusitas, de cara inferior lampiña ó alampiñada, con las ve- nas por fin formando redecilla por ambas caras, son largas de 7 á 2", con el peciolo corto y color amarillo-rojizo ; flores blancas en espi- gas racemosas, elongadas, flojas y colgantes, ordinariamente largas de 6 á 12", de cáliz subsentado ó cortamente pedicelado, largo de 1", sub-trunco y de la mitad del tubo de la corola sostenido por pedí- celos mas cortos que las brácteas, de cuyas axilas salen; estambres DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXI V. VERBERÍXEAS. 195 fértiles 4, drupa globosa, pisiforme y negra. C. quadrangídare^ Jacq. : G. T. V., 325. — Árbol que se elevaá 15 ó 20' de altura y cuyas ramitas tetrágonas se vuelven por último estriado-cilíndricas, con hojas apergaminadas y por fin tiesas, eliptical-oblongas, lanceolado- oblongas ó elípticas, ordinariamente obtusas, de cara inferior lam- piña ó alampiñada, largas de 6 á 2", y cuya redecilla formada por las venas se vuelve por ñn bastante preeminente por ambas caras ; flores blancas en racimos espigados elongados y flojos, de ordinario largos de 6" á 10"; de cáliz subsesil, largo de 1" 1|2, cuyo vértice es desigualmente lobado y mitad del tubo de la corola; estambres fértiles 4 y á veces 5 ; drupa sub-giobosa, al principio roja y por úl- timo negra. C. ciiiereiim , L. 3. Arbusto de 10 á 12' de altura, cuyas ramitas apenas tetrágonas y mas luego estriado-cilíndricas, llevan hojas apergaminosas, por último coriáceas, eliptical-oblongas, obtusitas, lampiñas, de cara superior pálida y lustrosa, mientras la inferior tiene sus nervaduras arqueadas, largas de 8 á 5'" y pecioladas ; racimos frecuentemente compuestos por la base, tiesos y erguidos, largos de 8 á 4", cuyos pedicelos aproximados y estendidos son mas cortos que el cáliz cam- panudo, sub-trunco, largo de 1" 1|2 y li2 á 2{3 mas corto que el tubo de la corola; estambréis 4, drupa ovoídeo-oblonga, negra y larga de 4'". C. caiulatiim, L. D. Clerodendron acídeatiim, Gr. — Volkameria aculenta, L. — Cl. fragrans, W. — Volli, japónica, Jacq. E. AvicEííÍEAS. — Avicennia, L. — Arbolito muy ramoso que se eleva á como 16 ó 25' de altura, de hojas ovales, algo acorazona- das por la base, enteras, pecioladas, apergaminado-tiesas, de cara superior blanca y lustrosa, mientras la inferior es tomentosa. Flo- res blancas en especies de racimos axilares, cuya corola tiene los lóbulos estendidos, lampiñas superiormente y sedosas esteriormente; estigmas subsesiles. A . tomentosa, Jacq.: C. T. Y. , 112. — Árbol algo mas bajito que el anterior, con muchas ramas largas, rectas y en forma de varita, delgadas, blancas y que llevan hojas lanceoladas ó lanceolado-elípticas, aguzadas ú obtusitas, lustrosas y lampiñas por ambas caras, cuya inferior es blanquecina. Flores de corola pubes- cente por ambos lados y cuyos lóbulos están doblados hacia afuera ; estambres esertos iguales, con el estilo. A. nítida, Jacq. : Familia 16. — LABIADAS, LABIATAS ó LAMIACEAS. — Plantas herbáceas anuales ó perennes, sofruticosas ó frútices y raras veces arbustos de tallos y ramos de ordinario tetrágonos, ho- jas simples, enteras, festoneadas, dentadas ó lobadas, pubescentes ó velludas, mas rara vez lampiñas ó alampiñadas, .pecioladas, opues- tas ó verticiladas. Flores siempre hermafroditas en grupos axilares, tan furnidas que simulan verticilos lejítimos y cuya reunión forma espigas simples ó apanojadas mas ó menos flojas, mas ó menos largas y terminales, con brácteas y hojas florales, mas ó menos co- loridas, formadas de un cáliz tubuloso, monosépalo, persistente, or- dinariamente bilabiado y con 4-5 divisiones ó dientes, que á veces son punzantes, casi siempre estriado ; corola monopétala irregular, de ordinario bilabiada, cuyo labio superior, muchas veces con figura 196 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. de velmo, tiene los estambres escondidos, los cuales insertos en su garganta son 4 j didínamos, y algunas raras veces 2 solamente, por causa del aborto de las demás, pistilo único con un ovario 4-lobo ó 4 ovarios distintos sentados sobre un disco hipójino, uniloculares y monospermos , estilo ginobásico único, largo, filiforme y terminado por un estigma bífido. El fruto consiste en un tetraquenio ó 4 aque- nios contenidos en el fondo del cáliz acresciente bastantes veces y' ocultados por él, con una semilla recta ordinariamente sin endos- permo. Análisis dicotómica de las tribus y de las suh-trihus establecidas en esta familia. 1. Estambres 4, y rarísimas veces dos, 2. — Estambres 2, siem- pre rectos y ascendientes, con las celdillas de las anteras oblongo- lineares, solitarias ó separadas por un conectivo mas ó menos largo, filiforme y estrecho, rarísimas veces aproximadas; cáliz de divisio- nes iguales^ cuyas superiores están mas ó menos reunidas y ordina- riamente bilabiado : corola siempre bilabiada. T. I. Monárdeas. A. 2. Siempre 4 estambres, 3. — 4 ó á veces dos estambres distantes, rectos, divaricados ó conniventes' por debajo del labio superior; con anteras biloculares de conectivo filiforme; lóbulos de la corola pla- nos y abiertos ; cáliz con estrias paralelas en número igual ó doble de sus dientes, ó 13 reunidas por pares. T. II. Menthoídeas, 7. 3. Ascendentes ó divaricados, 4. — Siempre los inferiores mas largos y declinados ó inclinados en el lóbulo inferior de la coro- la, 10. 4. Cuyos posteriores mas largos son ascendentes ó diverjentes; cáliz igual ú oblicuo, con 15 estrias paralelas y lonjitudinales ó sub- bilabiado ; corola inclusa ó esertay cu^^as fauces son ordinariamente ensanchadas con el labio superior abovedado y el inferior abierto. T. III. Nepéteas. — Ascendientes y paralelas, 5. o. Corola cuyo labio superior es con forma de yelmo, 6. — Corola sin labio superior ó que no es nunca con figura de yelmo y cortísimo^ mientras el inferior es elongado ; algunas veces la corola es sub- igual. Estambres inferiores mas largos; raramente los estambres son paralelamente ascendientes y ordinariamente esertos; estilo deciduo. T. IV. Ajugoídeas. D. 6. Estambres mas largos, ascendientes paralelamente por debajo del yelmo, que es ordinariamente cóncavo; labio superior de la co- rola mas frecuentemente cóncavo ó en forma de nave; aquenios lisos tuberculados, rectos y libres desde la base T. V. Estaquídeas. 13. — Cáliz sub-igual, corola bilabiada, estambres ascendientes paralela- mente por debajo del yelmo, cuyos inferiores son mas largos; nue- cecitas carnosas ó sub-abayadas, ordinariamente sub-conadas por la base ú oblicuamente pegadas. T. YI. Prasíeas. 7. Corola siempre mas ó menos bilabiada, 8. — Corola no bila- biada, pero sub-igual. con los estambres distantes y no conniventes. S.-T. I. Mentheas. — Mentía mhra, L. : C. T. V., 251-293. 8 Siempre con 4 estambres, 9. — Con 2 ó 4 estambres ascendien-* DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXIV. — VERBERÍNEAS. 197 tes por la base, mientras que el vértice es diverjente, ó conniventes y ascendentes paralelamente por debajo dellabio superior de la co- rola arqueado, cuyo tubo está desnudo por adentro; anteras bilocu- lares. S.-T. II. Melíseas. 9. Celdillas de las anteras confluyentes, después de la fecundación óvalo-arriñonadas ú orbiculares. S.-T. III. Pogostómeas. — Po- gostomea pachidi. — Labios de la corola á veces oscuros ó muy poco pronunciados, con el tubo desnudo por adentro; estambres distantes y diverj entes ó divaricados, no conniventes, de anteras biloculares. S.-T. lY. Thymeas. B. 10. De cáliz las mas veces posterior, la corola estando mas tirada por delante, con el diente superior mas largo que los demás; corola también inclinada por delante ó declinada; anteras tiernas sub- biloculares y después de la fundación uniloculares por haberse vuelto confluyentes las celdillas y entonces óvalo-arriñonadas ú orbicular- mente abiertas. T. VII. Ocimoídeas, 11. 11. Corola bien bilabiada, cuyo labio superior es bífido, mientras que el inferior es trífido, con la lacinia mas inferior contraída por la base, y por fin de repente inclinada hacia abajo. S.-T. I. Hipití- deas ó LavandijLEas C. — Corola mas ó menos labiada, 12. 12. Corola con la lacinia inferior elongada y cóncava. S.-T. II. Plectranteas. — Lacinias de la corola sub-iguales, cuyas supe- riores son mas ó menos conadas en labio, mientras la inferior mas angosta y declinada, es plana ó lijeramente cóncava. S.-T. III. Mos- CHÓS:\ÍEAS. 13. Cáliz siempre manifiestamente bilabiado y nunca hinchado, cuyos labios se quedan cerrados sobre el fruto. S.-T. I. Escutelá- RiEAS. Scutellaria imrpuransceíis, Sw. : C. T. V., 140 — Cáliz no bilabiado ó rarísimas veces bilabiado, 14.. 14. iNunca bilabiado, con 2 ó con 4 lóbulos, cálices fructíferos hinchados. S.-T. II. Melíteas. — Rarísimas veces manifiesta- mente Iñlabiado, pero ordinariamente tul)uloso, campanudo á in- fundibuliforme, con 5 ó 10 dientes iguales ú oblicuos. S.-T. III. Lamieas. — Leueas Martinicensis , R. Br. C. T. Y., 138-254. — Leo- NiTis nepetafolia, R. Br. : C. T. Y., 139. A. MoNÁRDEAS. — Salvia, L. 1. Yertícilos florales mas ó menos distantes, 2. — Yertícilos florales aproximados : corolas cortamente esertas. Planta anual, alta de 1' á 2", recta, tiesa y pubescente, con hojas ovales, puntiagudas,^ aserradas, largamente pecioladas y lar- gas de 2 á 4", cuyas flores ovales son algo mas largas que los pedice- los ; flores azules en espigas, cuyos verticilos son poco furnidos^ de cáliz campanudo, velludo, pubescente, con el labio ¿;uperior oval y puntiagudo, mientras el inferior es bidentado, óvalo-lanceolado y aguzado, corola cortamente eserta, lampiña, conteniendo los estam- bres inclusos y largos de 4 á 5'". S. Msimmco., L. 2. Corola pequeña, verticilos distantes, 3. — Corola superior- mente como de 1|2" de largo, verticilos por último distantes, 4. 3. Yerba anual, difusa de liojas ovales puntiagudas por el vértice y acuñadas por la base, aserradas, alampiñadas ó aveces con pelo esparcido y largas de 1" lj2 á 1", cuyas florales son subuladas: flores 198 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. azules, cuyos verticilos de 2 á 6 flores son arracimados, de cáliz glanduloso, mitad mas corto que la corola y largo de 3'", con el la- bio superior entero y obtuso, mientras el inferior es bipartido, con los segmentos deltoídeos, obtusitos ó mucronados. S. occidenta- lis, Sw. — S. obscura, Btli. C. T. V., 252. — Planta sub-fruticosa muy ramosa, alta de'2 á 3', un poco peluda y con hojas deltoídeas, obtusas, truncas ó sub-acorazonadas por la base, festoneadas, ligeramente pu- bescentes y largas de 12 á 6'", cuyas florales mas pequeñas son lan- ceoladas: verticilos de 2 á 6 flores arracimadas, cáliz glanduloso de labio superior entero, conforme al inferior que tiene 2 dientes del- toídeos y que pasa un poco mas allá de la mitad de la corola azul ó blanca v larga de 3'". S. serótina, L. — >V. dominica, Sw. C. T. V,, 253. 4. Planta herbácea, recta, poco ramosa, de hojas acorazonado- ovales ú aovadas, festoneadas, largas de 1 á 2", á veces con la cara inferior peludo-pubescente, cujeas florales deciduas son óvalo-lan- ceoladas ; flores color grana, dispuestas en verticilos distantes y con 6 á 10 flores, de cáliz pubescentito con 3 dientes óvalo-deltoideos, co- rola pubescentita 2 ó 3 veces mas larga que el cáliz, con los estam- bres esertos y largos de 8 á 10'". S. coccínea, L. — Planta sub- fruticosa derecha, ramosa, lijeramente pubescente, y con hojas ovales, puntiagudas, aserradas, alampiñadas y largas de 5 á 4'", cuyas florales deciduas son óvalo-suljuladas ; flores azules en verti- cilos arracimados 6-10 floros, de cáliz alampiñado entre las estrias pubescentitas, con 3 dientes conformes y subulados, como dos veces mas corto que la corola larga de 10'" y conteniendo los estambres inclusos. S. loMrifolia, Jacq. RosMAEiNus offxinaUs, L. : B. MiCROMERiA, Benth. — Arbustillo difuso muy ramoso, alto de 1 á 10', tuberculado-pubescente, de hojas pequeñas, largas sola- mente de 3 á 5'", ol)ovales ú ovales redondeaditas, con la márjen arrollada, enteras y de cara inferior peluda. Flores blancas 2-4 por verticilo, de cáliz sub-dentado, con los dientes cortos, subulado- lanceolados y obtusitos; corola de 3'" y mitad mas larga que el cáliz, con los estambres inclusos y cuyas celdas son paralelas; estilo eserto. M. ohovata, Benth. : C. T. V., 245. — Planta herbácea delicada é in- clinada, lampiña ó alampiñada, con hojas deltoideo-redonditas, con algunos dientes obtusos, aserrados, y cuyo peciolo mas ó menos largo es pestañoso; flores purpúreo-blanquecinas. dos por verticilo, sin brácteas y de cáliz pedicelado, peludo por los fauces, con los dientes deltoideo-obtusitos y dos veces mas cortos que la corola larga de 4 á 5'", con las anteras de celdillas paralelas inclusas. M. Brownei, Benth. C. G. I. Hyptis, Jacq. — 1. Flores en capítulos ó cabezuelas, 2. — Flores cuyos verticilos están dispuestos en espigas ó en cimas con- eontraidas, 4. 2. Sésiles y capítulos axilares, 3. — Sésiles y cabezuelas dispues- tas en racimos; planta herbácea fuerte, alta de 2 á 3', no muy ra- mosa, derecha, alampiñada, con hojas ovales, puntiagudas, des- igualmente aserradas, pecioladas y largas de 1 á 3"; capítulos DICOTILEDÓNEOS, — CLASE XXXíV. — VERBERÍNEAS. 199 ordinariamente paucífloros v dispuestos en racimos simples ó com- puestos, interrumpidos de cáliz igual, trunco y con el tubo cilin- drico y ventrudo por la base, cuyos dientes cortamente setáceos y erguidos son mucho mas cortos que el tubo, corola eserta. //. spi- cata, Poir. : C. T. V., 137. 3. Frútice ramoso, alto de 2 á 7", delgado, alampiñado y con po- cas ramas larguitas y estendidas que llevan hojas ovaloblongas, puntiagudas, igual y densamente aserradas, largas de 2-5", cuyas florales ol)longo-lineares y por último reflejas son mas cortas que los capítulos globosos , axilares y mas cortos que sus pedúnculos largos de 2"-!"; cáliz igual con dientes subulado-setáceos, erguidos y por fin lp3 del tubo; cabezas fructíferas, anchas de 10 á 12'" II. capitata, Jacq.: C. T. V., 248. — Planta herbácea cuyo tallo procum- bente ó ascendente echa raices por la base y es peludo por el vértice, bastante ramosa, alta de 1' á 2' li2, algo teñida de rojizo y con ho- jas pecioladas, cortamente ovaloblongas ú ovales, obtusamente aserradas y largas de 1", cuyas florales ovales aplicadas á las cabe- zas y casi tan largas como ellas, las cuales son globoso-hemisféricas tan largas como sus pedicelos ó mitad mas cortas que ellos y tienen 4-6"' de diámetro, de cáliz igual, trunco y con los dientes setáceos, erguidos, pelierizaditos y por último mas cortos que el tubo. H. atroriíbens, Poit. 4. Flores sésiles en espigas verticiladas ó formadas de verticilos, 5 — Verticilos en cimas contraidas, subsesiles ó pedicelados, 6. 5. Planta herbácea fuerte, de tallo bastante grueso inferiormente, algo ramoso y que se eleva á 6' ó 3' de altura, muy pelierizada, con hojas pecioladas, óvalo-lanceoladas, aguzadas, aserradas y cuyas florales son lineares ; espigas cilindricas, terminales y largas de 3" á 1", con frecuencia como apanojadas, de flores blancas cuyo cáliz igual tiene los dientes subulados y mas cortos que su tubo. II. spici- gera, Lam.: C. T. V., 137. 6. Hojas mas ó menos pecioladas, simplemente festoneado-aser- radas ó aserradas, 7. — Hojas largamente pecioladas, dos veces aserradas ó sub-sinuosas; planta fuerte peluda, alta de 3' á 5', ra- mosa y con hojas ovales, las inferiores siendo acorazonadas y cujeas florales son diminutas y setáceas ; capítulos formados de pocas flores 5 á 2 azuladitas y axilares, de cáliz subsesil ó muy cortamente pedi- celado y largo por fln de 5 á 2'", con 10 estrias y cuyos dientes su- bulado-setáceos, tiesos y abierto-erguidos son por último mas cortos Que su tubo, corola cortamente eserta. H. svnveolens, Poit.: C. t. V., 249. 7. Planta herbácea cuya parte inferior del tallo delgado es su- fruticosa, con frecuencia tendida en el suelo y de vértice ascendente, mas ó menos ramosa, alta de 2' ó sostenida por las malezas alcanza hasta 4 y 5', pubescentita ó alampiñada y blancuzca, con hojas pe- cioladas ovales, desigualmente festoneado-aserradas ó á veces sola- mente aserradas, de cara inferior peludo-pubescente ó alampiñada, cuyas florales son setáceas ; flores blancas y pintaditas unilaterales y dispuestas en cimas contraidas, cortas espirales y recorvadas, ra- cimosas (3 apanojadas y cuyo diámetro es 2-4"', de cáliz cortamente 200 DIVISIO^: segunda, fanerógamos. pedicelado, con 10 estrias j sub-igual, que tiene el tubo cortamente campanudo y densamente velludo por la boca trunca y cuyos dien- tes setáceos y sub-erguidos son mas cortos que el tubo largo de 1'" solamente. JI. pectinata, Poit. C. T. V., 250. — Mata bisanual de tallo en forma de varita, con ramos apanojados, que se eleva á 6' ó r de altura, ordinariamente alampiñada y de hojas cortamente pecioladas, oblongo-lanceoladas, ó lanceoladas, aserradas, cuyas florales son setáceas ó abortadas. Flores pequeñas blanquecinas en verticilos sésiles dispuestos en racimos interrumpidos y cuyo inferior es axilar, de cáliz igual y pedicelado con tubo cortamente campa- nudo y glabro, y cuyos dientes óvalo-lanceolados y erguidos son mas cortos que el tubo. H. verticiUafa, Jacq.: C. T. V., 241-223. G. II. OciMUM, L. 1. De estambres cuyos filamentos superiores son apendiculados ó llevan un diente por la base, 2. — De estambres cuyos filamentos no llevan diente alguno, 3. 2. Planta herbácea, derecha, ramosa, como leñosa por la base, alta de Y á 1' 1x2, pubescente y con hojas pecioladas, ovales, agu- zadas por ambos estreñios, denticuladas ó enteras, de cara inferior blanquecina y con los peciolos pestañosos; fiores en espigas termi- nales formadas de muchos verticilos aproximados, cuyo cáliz pe- queño y algo cilindrico es mitad mas corto ó tan largo como la co- rola. O. americanmn, L. C. T. V., 246. 3. Planta muy lampiña , erguida, de tallo simple ó muy poco ramoso y alta de 8'^ á Y, con hojas pecioladas, anchamente ovales, puntiagudas, gruesamente aserradas y de base cuneiforme, cuyas florales son sésiles, deciduas y n>as cortas que los cálices; fiores en racimos sencillos, con cálices fructíferos ovales, recorvados, muy lampiños, cuyo diente superior oval, obtuso y cóncavo alcanza la mitad de los laterales mucronados, algo mas cortos y parecen alas, mientras los inferiores son ovales y casi tan largos todos como la corola. O. sellovii, Benth. — Planta herbácea anual de tallo dere- cho, ramoso, alto de 1' á 1' 1^2, alampiñada, con hojas pecioladas, ovales, puntiagudas, aserraditas, de base cuneiforme ó redondita, alampiñadas, cuyas florales son bracteiformes y deciduas; flores cuyo cáliz fructífero recorvado es oblongo y ensanchadito en derredor de los frutos, con el diente superior obtuso, cóncavo y decurrente hasta la base del tubo, mientras los 4 inferiores óvalo-lanceolados son subulados, y de ellos 2 son laterales muy aguzados y simulan como alas ; corola inclusa. O. micranthum, W. D. Teuceium, L. Planta herbácea cuyo tallo simple, derecho, se eleva á Y -Y 1^2 de altura, lampiña y con hojas cuneiformes elípti- cas, pinatífido-aserradas, de lóbulos ó dientes oblongos y obtusos; verticilos bifloros y axilares ; pedicelos de las flores dos veces mas largos que el cáliz profundamente 5-fido ; corola azulito-blanque- cina casi dos veces tan larga como el cáliz. T. cul)ense, L.: C. T. V., 136. — Yerba velluda y pubescente ó alampiñada, cuyo tallo derecho y ramoso se eleva como á 2-3' de altura, con hojas pecioladas ovales, ú óvalo-lanceoladas, fuertemente aserradas ; verticilos aproximados y formando una espiga delgada ; flores de cáliz subsesil, ventrudo, oblicuo, desigualmente 5-clentado por su vértice contraído y cuyo DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXV. - PRIMULÍNEAS. 201 diente superior es mas ancho; corola dos veces tan larga como el cáliz. T. inflatum, Sw. Familia 77. — PZANTAJINF AS. — Vlanian herbáceas anua- les ó vivaces, de hojas simples, basinervias, pecioladas, radicales y ordinariamente dispuestas á manera de roseta; de flores hermafro- ditas de ordinario, ó á veces monoicas que son muy pequeñas y salen de la axila de una bráctea, mas ó menos desarrollada y escariosa, dispuestas en espigas simples, cilindricas, largas ó globosas y termi- nales en el vértice de un pedúnculo axilar mas ó menos largo y si- mulando un bohordo ; se componen de un periantio doble y persis- tente, cuyo esterior 4-partido reemplaza al cáliz lejítimo, mientras que el interior tubuloso, escarioso y 4-fido hace papel de corola y lleva 4 estambres pegados en su tubo, alternos con sus divisiones y de filamentos largos, derechos y esertos. Pistilo único formado de un ovario li1)re superior 1-2 ó 4-locular polispermo, cuyo vértice lleva un estilo simple terminado por un estigma simple ó á veces bífido y provisto de pelos colectores. Fruto capsular ordinariamente ó un pixidio, con 2 ó 4 celdillas conteniendo pocas ó muchas semillas pequeñas, pegadas en una placenta axil ; otras raras veces consiste el fruto en una cápsula dehiscente monosperma; embrión cilindrico, escéntrico y homótropo contenido en un endospermo carnoso. Plan- ta g o major, L. Var. — P. m. trópica, C. T. V., 73. CLASE XXXV. — PRIMULÍNEAS. Familia 78. — PLUMB AJINE AS. — Vlímia^ herbáceas ó fru- ticosas y algunas veces arbustos sarmentosos ; de hojas simples, en- teras, lanceoladas, cortamente pecioladas, alternas, á veces envai- nadoras por la base y agrupadas en el pié del tallo, cuyas flores hermafroditas están en espigas simples mas ó menos globosas, si- tuadas en el ápice de un bohordo ó de un pedúnculo mas ó menos largo que lo simula, otras veces en racimos ó en panojas terminales, y constan de un cáliz tubuloso 5-dentado, provisto de glándulas es- tipitadas y 5-estriado, otras veces escarioso y entero, de una corola asalvillada, 5-partida, la cual suele faltar á veces y está reempla- zada por apéndices petaloídeos ordinariamente distintos; estambres 5, hipójinos, provistos por arriba de su base de un apéndice dorsal petaloídeo, ó ceñidos por los lóbulos opuestos de la corola que se in- serta con ellos sobre un disco ; pistilo único formado de un ovario simple unilocular con un* solo óvulo, colgando de un funículo central, cuyo ápice lleva un estilo simple ó 5-partido, con un estigma sul)U- lado. El fruto es una cápsula monosperma envuelta por el cáliz cuya semilla contiene un endospermo carnoso en cuyo centro está alegado un embrión axil . Tribu 1\ EsTATÍCEAS. Cáliz escario.so ó coriáceo, corola formada de 5 pétalos ó apéndices petaloídeos estaminíferos; estilos sul)- distintos; pericarpio membranáceo indehiscente y ruptible por el vértice circularmente. Statice Bahamensis, Gr. — T. 2. Eltlum- BAJÍXEAS. Cáliz herbáceo; corola monopétala que carga con los estam- bres; estilos soldados entre sí por la base : pericarpio capsular. 202 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. Plumbago, L, Arbusto sarmentoso cuyas ramas delgadas, largas de algunas varas y lampiñas llevan hojas ovales ú oblongo-lanceo- ladas, aguzadas ó puntiagudas, v cu^'a base se vuelve peciolo muy corto, pero sin orejitas; ñores blancas en racimos cuyo tubo lleva glándulas sobre sus ángulos convexos; con brácteas oblongas aguzadas, cuya inferior es algo mas larguita, pero todas mas cortas que el cáliz cilindrico y cónico á la par por la base, la mitad mas corto que el tubo filiforme de la corola, largo de 8 á 10" V cuva corola tiene los lóbulos mucronados. P. scojidens, L.: C. T. Y., 38. —-Flores azules en racimos apanojados; vejetal fruticoso mucho mas pequeño que el anterior, con muchos ramos divaricados y nunca sarmentosos, lampiños, de hojas ovales, oTdongas, algo romboideas, aguzadas por ambos estremos y de base que se continúa con el peciolo casi alado y orejado ; flores con brácteas glandulosas, ovales aguzadas y cuyas laterales son menores, las esteriores tres veces mas largas y la inferior tres veces mas corta que el cáliz 5- fido, con la base trunca y cuyos dientes son lanceolados, lampiño inferiormente y glanduloso superiormente ; los cálices fructíferos son tubulosos, cónicos, endurecidos *}" apenas asurcados; tubo de la corola la mitad mas largo que el cáliz y dilatado hacia el vértice : las lacinias del limbo ovales y aguzadas P. cceriileay Kth. Familia 79. — MIRSIÑEAS. MIRCINACEAS. — Arbustos ó árboles de hojas alternas rarísimas veces opuestas, ó temadas, enteras ó dentadas, mas ó menos grandes; flores ordinariamente hermafroditas, pero algunas veces unisexuales y dispuestas en raci- mos, en cimas ó simplemente en grupos tan pronto axilares como terminales; se componen de un cáliz persistente, con 4 ó 5 lacinias, de una corola monopétal.a regular, con 4 ó 5 divisiones profundas, en cuya base están insertos otros tantos estambres que les son opues- tos y cuyos filamentos cortos sostienen anteras asaetadas ; pistilo formado de un ovario libre unilocular, con algunos óvulos pegados en una placenta central, en la cual están mas ó menos profunda- mente anidados y cuyo vértice lleva un estilo sencillo que se ter- mina por un estigma que suele ser bílobo. El fruto es una drupa seca, ordinariamente globosa y pequeña; otras veces consiste en una baya con 1 hasta 4 semillas abroqueladas, de hilo cóncavo y cuyo tegumento simple cubre un endospermo carnoso ó córneo, en el cual se aloja un embrión cilindrico algo encorvado y transversal al hilo. Sub-órden 1*. Meseas. Corola monopétala; ovario adherido al cáliz é infero, con huevecillos en número indefinido y anidados en los alvéolos de la placenta central, nunca cubiertos por encima, y volviéndose semillas apeonado-angulosas y aplanadas, cuyo embrión no transverso respecto al fruto es cilindráceo, con la comisura de los cotiledones dirijida al flilo. Mcesea. — Sub-órden 2 y tribu 1* á la vezEuMiESÍNEAS. Corola poli ó monopétala, ovario supero con óvu- los solitarios ó en número indefinido en los alvéolos profundos deltro- fospermo central, y al fin mas ó menos cubiertos por membranas procedentes de los alvéolos ; semilla única revestida de membranas plaeentarias resiníferas , casi globosa, comunmente escavada en la base, con embrión transverso respecto al fruto, linear y frecuenta- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXV. — PRIMTLÍNEAS. 203 mente arqueado, con la comisura de sus cotiledoneí¡ dirijida á los la- dos de la semilla. — Myrsine floribunda, R. Br. Tribu 2. Embelíeas. Corola polipétala; liuevecillos pocos ó uno solo; semilla vestida. — Emhelia. — Tribu 3. Ardisieas. Corola monopétala; óvulos pocos ó muchos y en número indefinido; semilla vestida. — Ardisia caribma, Miq. — A. cubana, A. De. Famüio. 80. — TEOFRASTEAS. — kv\)o\e^ pequeños, arbus- tos ó frútices, nunca jamas lechosos, pero á veces algo resinosos, con hojas simples opuestas ó sub-verticiladas, coriáceas y sin estí- pulas. Inflorescencia indefinida j racimosa, cujas flores las mas ve- ces hermafroditas, carnosas j cartilajinosas á la a'cz, son ordina- riamente de color anaranjado, pero sin embargo tan pronto blancas como rosadas y constan de un cáliz 5-partido ó 5-fido, cuyos lóbulos son pestañosos y de estivacion quincuncial : corola monopétala campaniforme 5-fida ó de limbo 5-lobo, de igual estivacion que el cáliz; con 5 apéndices alternos con sus lóbulos é insertos en la base ó en el ápice de su tubo, de estivacion distinta, otras veces hay otros tantos menores que están opuestos á los lóbulos de la corola ; estambres fértiles 5, pegados en la base de la corola y opuestos á los lóbulos ; de filamentos ligulados ordinariamente libres oraras veces reunidos, con anteras eríruidas, lanceoledas v biloculares, cu- yas celdas están reunidas por un conectivo que se dilata por encima de ellas en un apéndice trunco y mucronadito, estrorsas y lonjitu- dinalmente dehiscentes. Ovario libre unilocular,de placenta central ovoidea, globosa y cortísimamente estipitada, mas rara vez no hay placenta, polispermo y de cuyo ápice sale un estilo único termina- do por un estigma cabezudo oscuramente 2 ó 5-lobulado. Fruto glo- boso, crustáceo ó cartilajinoso, seco ó carnosito, indehiscente ó reventándose irregularmente después de seco, con semillas elipsoí- deas, las mas veces lateralmente sub-comprim.idas y cubiertas por la pulpa placentaria, que algunas veces se ha vuelto membranosa ; ombligo lateral, central ó situado hacia la base, redondo y elongado: endospermo copioso con el embrión casi escéntrico ó central, tan largo como la semilla, casi paralelo con la placenta y recto ; de rai- cilla infera mirando al estremo inferior, un poco cóncava, no perfo- rada y cilindrica; cotiledones aplicados el uno al otro, por la cara, ovales ú oval-agudos, foliáceos y mas cortos que la raicilla. Tribu 1^ Clavíjeas ó Teofeásteas. — Frutos no pequeños, cu- yas semillas están cubiertas de una membrana placentaria coriácea y común ; comisura de los cotiledones opuesta á la semilla lateral. — Theophrasta Jussiei, Lind. C. T. V.,208. — T. 2. Jaquiníeas. Frutos pequeños con las semillas anidadas ó alojadas en una placenta mucilajinosa y casi cubiertas por ella; comisura de los cotiledones mirando al hilo. Jaquinia, L. 1. Hojas anguloso-espinosas, 2. — Hojas nunca an- guloso-espinosas, mucronadas ú obtusas por el vértice, 3. 2. Arbusto muy ramoso que se eleva á 3 ú 8' de altura, de hojas verticiladas, lanceoladas y cortamente pecioladas y de márjen un poco arrollada; flores solitarias en el ápice de las ramitas ó en um- 204 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. belas poco furnidas, cuyos pedicelos, como 4 veces mas cortos que las hojas, son inclinados ó colgantes. /. rnscifolia, Jacq. 3. Hojas aproximadas ó sub-verticiladas y provistas de puntitos transparentes, 4. — Hojas esparcidas ó sub-verticiladas,, sin punti- tos transparentes, lampiñas, cuyo vértice aguzado se termina en una arista ó espinita, mientras la base contraída es sub-sentada y de márjen arrollada y largas de 2" lt2 á 1" 1^2 sobre 6'" á 10'" de ancho; arbusto de ramos cilindricos y lampiños, cuyas flores de co- lor anaranjado están dispuestas en racimos terminales, flojos, lije- ramente pubescentes; de pedicelos casi 4 veces mas cortos que las hojas sosteniendo 3 flores erguidas un poco mas largas que ellos, de corola cuyo tubo campanudo y largo de 3'" escede un poco al cáliz. — /. aristata, Jacq. — /. wñihellata, A. De. — ./. aurantiaca, Ait, — ./. Caracasana, Kth. 4. Ramitas verticiladas un poco mas gruesas ó crecidas hacia la inserción de las hojas, 5. — Eamitas cilindricas no verticiladas ni crecidas tampoco hacia la inserción de las hojas ; árbol que se eleva hasta 30' de altura, pero á veces se queda arbusto ó arbolillo, con hojas obovales ó espatuladas y provistas de muchas glandulitas transparentes, cuya cara inferior es mas ó menos venosa; flores en racimos terminales formados de grupos tan largos como las hojas y con brácteas ovales agudas y diminutas. /. arbórea, Y. C. T. Y.. 856. 5. Arbusto bajito, ramoso y lampiño, con hojas acuñado-espatu- iadas ú obovales, lampiñas, coriáceas, de márjen arrollada y con glandulitas, subsesiles, obtusas ó mucronadas y largas de 4" 1|2 á \" 1|2 sobre 1" l{2-6'" de ancho ; flores blancas en racimos termi- nales flojos tan largos como las hojas, cuyo tubo de la corola infun- dibuliforme es dos veces mas largo que el cáliz y de 3'" ; baya pisi- forme anaranjada. /. armillaris, Jacq. C. T. Y., 856. CLASE XXXYI. — ERICOÍDEAS. Farailia 81. — ERICINJEAS ó ERICÁCEAS. — Matas, plan. tas fruticosas, arbustos y hasta arbolitos con hojas alternas y bas- tantes veces opuestas ó verticiladas y sin estipulas, cuyo tamaño y forma varian muchísimo, pecioladas ó sésiles, peludas, pubescentes ó lampiñas; flores de inflorescencia muy variada, que constan de un cáliz 4 ó 5-partido, libre, persistente y cuyos lóbulos son casi igua- les; corola monopétala 4 ó 5-partida ó formada de 4 ó 5 pétalos, regular ó bastantes veces irregular; de estivacion empizarrada ; es- tambres poco ó nada soldados con la corola, ordinariamente hipóji- nos, definidos y en número igual á los pétalos ó á las divisiones de la corola y á veces el doble de ella, con filamentos libres ó raras ve- ces sosteniendo anteras biloculares, cuyas celdillas duras, secas y separadas en el ápice ó por la base, son frecuentemente apendicu- ladas y se abren por un poro terminal ; pistilo compuesto de un ova- rio libre plurilocular polispermo, cuya base está algunas veces ro- deada de un disco nectarifero hipójino, mientras que el vértice lleva un estilo único y tieso terminado por un estigma indiviso, dentado ó trüobo. Cápsula polisperma plurilocular y cuya dehiscencia es tan DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXVII. — DIÜSPIROÍDEAS. °20o pronto septícida como loculícida, ó á veces el fruto consiste en una baya : semillas pequeñas indefinidas, insertas en placentas centrales y de testa muy adherente, con endospermo carnoso; embrión rollizo con cotiledones cortos y raicilla próxima al hilo. Análisis dicot árnica de las tribus. 1. Fruto capsular, 2. — Fruto abayado é indehiscente ; corola decidua. Arbustos siempre verdes. T. I. Arbuteas. ArhiUus pim gens, Kth. — A. guayaha, Meo. 2. Loculícido dehiscente ó con valvas septíferas ; corola caduca ; arbustos siempre verdes ó de hojas caedizas. T. IJ. Andromédeas. — Gaulteria odorata, Kth. Pejoa, Ceas. — Dehiscencia septícida; valvas dobladas hacia dentro por las márjenes y por otros tantos tabiques bi-lamelados : arbustos de corola bastante grande y caedi- za; disco hipójino glanduloso y frecuentemente escamoso. T. III. RODEREAS, 3. 3. Corola monopétala. S.-T. I. Rodereas Corola poliépetala. — S.-T. II. Ledeas. — Bejaria ó Befaría urens. CLASE XXXVII. — DIOSPIROÍDEAS. Fa7)iiliam.--' DIOSPÍREAS ó FBBNACEAS.— Arhusios ó árboles de hojas simples, enteras, coriáceas, pecioladas y alternas, cuyas flores, ordinariamente dioico-polígamas ó hermafroditas y pe- queñas, están en grupos axilares y se componen de un cáliz monosé- palo ó á veces formado de 5 sépalos sueltos; en el primer caso es persistente y con 4-5-6-7 divisiones mas ó menos profundas, las cua- les están algunas veces reemplazadas por igual número de dientes; corola monopétala campanuda con 5 ó 6 segmentos mas ó menos profundos y torcidos por la derecha, inserta en la base ó en la gar- ganta calizinal : estambres 3-8 y hasta 20 hipójinos, insertos en la base de la corola con cuvos lóbulos alternan v ordinariamente dis- puestos en dos señes : de anteras grandes erguidas, lineares lanceo- ladas y biloculares. Pistilo formado de un ovario supero con 3 á 12 celdillas conteniendo cada una i ó 2 óvulos colgantes, y cuyo vértice lleva un estilo simple ó 5-p'artido. terminado por un estigma entero ó bífido. Fruto abayado ó drupáceo uni ó poli-locular con una sola semilla comprimida en cada celda, cuyo embrión alojado en el cen- tro de un endospermo cartilajinoso tiene igual dirección que su radi- cilla delgada y supera. — Diospiros Virginiana. — D. Tetr asper- ona, Sw, Farailia S3.—AQÜIF0LIACFA>S ó ILICIJVEAS'.—Avhnsioii ó arbolillos y árboles bajitos de hojas simples coriáceas, lampiñas, dentadas, angulosas, aguijonosas, undulosas, raras veces enteras, pecioladas, alternas ú opuestas; flores siempre hermafroditas soli- tarias ó en grupos axilares y compuestos de un cáliz con 4 ó 6 sépalos pequeños é imbricados ; corola con tantos pétalos cuantos sépalos tiene el cáliz, soldados entre sí por la base y formando una 20(3 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. corola seudo-monopétala, la cual lleva tantos estambres cuantas di- visiones hay j con las cuales alternan. Pistilo cuyo ovario único superior y trunco tiene 2 ó 6 celdillas conteniendo cada una un solo óvulo colgante y lleva en su ápice un estigma ordinariamente sen- tado y lobulado. El fruto carnoso es abayado ó drupáceo, contiene tantas nuececitas indehiscentes ó liuesecitos leñosos, fibrosos y mo- nospermos, cuantas celdas tenia el ovario cuya placenta es axil ; se- millas con embrión diminuto, homótropo j situado en el vértice de un endospermo carnoso G. I. Ilex, L. — Flores mas ó menos polígamas y de corola enrodada, 2. — Flores nunca polígamas, 3. 2. Árbol de mediano tamaño, cuyas hojas elíptico-obovales ú ova- les, pecioladas y largas de 4" á %'\ son redondeadas por la base, bien enteras ó aserrado-ondeadas, con los dientes bastante apartados, de cara superior lustrosa, con venas delicadas proeminentes por ambas caras; peciolo largo de é"' á 8'" y de cara superior acanalada. Flores en corimbos tan largos como los peciolos, amanojados y provistos de pedicelos accesorios ; corola ancha de 3 á 4'", con 4 ó 5 divisiones, así como el cáliz; 4 ó 5 estambres, de anteras ovales obtusas y de base sub-acorazonada ; baya globosa, lisa, pisiforme y ordinaria- mente con 5 huesecitos lisos. /. dioica, Gr. — Prinos dioica, V. 3. Corola enrodada, 4. — Corola no enrodada y dividida casi hasta la base, 5. 4. Arbolito de como 30' de alto ó arbusto de 2', cuyos muchos ra- mos son fastigiados ó dispuestos á manera de pirámide, angulosos y cuyos ángulos escurridos simulan estípulas, muy hojosos y llevan hojas pequeñas obovales ó espatuladas emarjinado-mucronaditas y de base aguzada en peciolo corto, largas de 4'" á 12'", bien enteras y de cara superior sin venas y lustrosa; flores en corimbos 3-floros un poco mas largos que los peciolos y sub-sol'itarios ; cáliz y corola con 4 divisiones y 4 estambres, de anteras ovales oblongas. /. ob- cordata, Sw.: C. T. V.^, 498. 5. Árbol de 30' á 40' de altura, con hojas elípticas ú óvalo-lan- ceoladas, aguzadas ú obtusitas, sub-agudas" por la base, por arriba de la cual son bien aserraditas ó enteras , con la cara inferior ve- nosa, largas de 1" 1|2 á 3" 1^2, con un peciolo de 4 á 10'" de largo ; flores ordinariamente perfectas, en. corimbos solitarios algo mas largos que los peciolos ; corola dividida casi hasta la base en 4, 6 y hasta 8 lacinias: otras tantas divisiones tiene el cáliz y hay otros tantos estambres con las anteras ovales; baya globosa y asurcada, de 2'" de diámetro y de huesecitos con surcos. /. montana,, Gr. — Prinos montana, Sw. — Variedades : hojas pequeñas largas de 1", óvalo-lanceoladas y aguzadas. /. lanceolata. J. multiflora, Rich. Prinos lanceolata, Macf. -—/. Macfadieni, Wprs. — Hojas gran- des y largas de 3" á 3" 1^2, ovales, largamente aguzadas y con el peciolo tan largo como el pedúnculo común. /. ovata. C. T. V., 747. G.ll. Mygenda, Jacq. 1. Drupas ovoídeo-oblongas, hojas elípticas, 2. — Drupas ovales, hojas mas ó menos ovales, 3. 2. Espatuladas coriáceas, lampiñas, estrechándose en peciolo, largas de 2" á 1", aserradas v con los dientes diminutos muy DICOTILEDÓTv^EOS. — CLASE XXXVÍI. — DIOSPIROÍDEAS. 20*7 distantes ó nulos ; flores blancas en cimas pedunculadas, diva- ricado-dicótomas, paucífloras, dos ó cuatro veces mas cortas que las hojas; estigmas 4-sentados y coronando la drupa ovoídeo-oblonga, larga de 2'" sobre V" de ancho. 31. latifolia, Sw. 3. U obovales, de cara inferior lampiña ó pubescente, aserradas, subsesiles, largas de 8'"" á 12'", ordinariamente redondeadas por el vértice y con las venas distantes; flores en cimas pedunculadas pau- cífloras, casi tan largas como las hojas; estilo distinto con ún estig- ma 4-dentado, drupa oboval larga de 2"' M. 'rliacoma, Sw. M. Uragoga, Rich. C. T. Y., 384. — Obovales ú ovaloblongas, aser- radas, con los dientes apartados ú ondeadas, lampiñas, cortamente pecioladas, largas de 1" ó 2'' sobre 1¡2 ó \" de ancho, flores colora- das en cimas pedunculadas dos veces dicótomas, paucífloras, dos ó tres veces mas cortas que las hojas ; estilo distinto cuyo estigma es 4-dentado ; drupa oboval roja, M . pallens, Sw. Familia 84. — SAPOTACEAS ó SAPOTEAS. — Arbolillos ó árboles altos corpulentos y coposos, ordinariamente lactescentes, de hojas simples, coriáceas, persistentes, pecioladas, alternas ó espar- cidas, de ordinario sin estípulas, algunas veces de 2 colores, pero ordinariamente concóloras ; cuyas flores, siempre hermafroditas y pequeñas, están dispuestas en grupos axilares mas ó menos furnidos y constan de un cáliz monosépalo persistente con 5 ó 6 divisiones mas ó'menos profundas; corola monopétala, mas á menudo dobles y con 10 ó 12 divisiones profundas, cuyas interiores están alguna vez que otra reemplazadas por escamas en número igual ; estambres fértiles 5 ó 6 insertos en la base de la corola á cuvos lóbulos son opuestos, mientras los estériles alternan con ellos ; pistilo formado de un ovario simple, supero plurilocular, con la placenta axil y cada una de sus celdillas contiene un solo óvulo ascendiente, de vértice llevando un estilo simple terminado por un estigma 5-fido ó 5-lobo. El fruto es una baya mas ó menos gruesa, globosa ó mas ó menos ovala, con 4-12 ó raramente 2 celdas y por consiguiente otras ta,ntas semillas, pero de las cuales siempre suelen abortar algunas, mas ó menos gruesas, duras, lustrosas, ordinariamente comprimidas, con el ombligo blanco y que ocupa casi un lado entero ; testa fuerte y bien dura, sin endospermo : en ese caso el embrión es grande y oleoso ó con un endospermo^ entonces el embrión menor tiene los cotiledones foliáceos, siempre de raicilla corta -y ordinariamente inferior. G. I, Chiíysophyllu:\í, L. — 1. Nervaduras de las hojas pronuncia- das en la cara inferior y casi perpendiculares respecto á la costilla, 2. — Cara inferior con nervaduras mas ó menos pronunciadas y oblicuas respecto á la costilla, 3. 2. Fruto grueso y globoso ; árbol grande bastante corpulento y coposo, cuyas hojas, como sedoso-doradas por la cara inferior, son ovales ú oblongas, puntiagudas, bastante grandes y pecioladas ; flo- res purpúreo-blanquecinas pequeñas, cuyos pedicelos fasciculados son mas cortos que los peciolos, de corola campanudo-infundibuli- forme, con el tubo dos veces mas largo que el cáliz ; anteras ovoi- deas; estigma 8 ó 10-festoneado; baya verdosita^ purpúrea ó azu- 208 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. lita. C. caimito, L. : C. T. V. , 81 . — Baya ovoídeo-oblonga y pequeña, azul oscuro ó negra; árbol menos grande que el precedente, cu^^as hojas ovales, obtusitas ó mucronadas son dorado-sedosas ó dorado- tomentosas inferiormente, pecioladas, largas de 3" á \" 1¡2 sobre 2" de ancho; ñores blanquecinas cuyos pedicelos amanojados son mas cortos que los peciolos, corola campanudo-infundibuliforme, anteras ovoideas»; estigma 5-festoneado ; baya con una sola semilla por aborto, larí?a de 8'". C. oUtiforme, Lam. — C. monpyreiieitm, Sw.: C. T. Y., 82. 3. Arbusto de hojas dorado-sedosas, inferiormente lanceolado- oblongas ó eliptical-oblongas, con una puntita obtusa, con venas delicadas, largas de 3" á 1" 1"[2 sobre 8"' á 10''' de ancho ; flores con pedicelos fasciculados tan largos como los peciolos ; tubo de la corola eserto ; anteras ovoideas; ovario 5-locular, baya larga de 6'" ovoí- deo-oblonga y con una sola semilla. C. micropliyllum ^ Jacq. — Ár- bol bastante grande, cuyas hojas eliptical-oblongas ú oblongas con una punta obtusa son largas de b" á2", pecioladas y no tienen la cara inferior sedoso-dorada, pero lijeramente sedosa y por fin alam- piñada ; flores con pedicelos amanojados, mas cortos que los pecio- los, de corola campanuda sedosa, cuyo tubo es dos veces mas largo que el cáliz ; anteras ovoideas ; estigma 5-6-festoneado ; baya azul oscuro larga de 6'" á 8'" y ovoidea ú oboyoídea. C. glal^ncm., .Jacq^. C. microcar^mm, Sw. C . argentemn, Sieb. G. II. Sapota, Plum, 1. Cáliz 5-partido, anteras ovoideas ó deltoí- deas, lateralmente dehiscentes; apéndices de la corola diminutos, lineares y encorvados; ombligo tan largo como la semilla; hojas lustrosas, estriadas á causa de unas venas delicadas y transversas, 2. — Cáliz con 6 hojuelas dispuestas en 2 series ; anteras asaetado- lanceoladas, lateralmente dehiscentes, ma;^ cortas que los apéndices de la corola; ombligo mas corto que la semilla; hojas estriadas á causa de venas distantes, transversas y apenas notables, pedicelos solitarios y axilares, 3. 2. Árbol cuyas ramitas y pedicelos son lijeramente sedosos, con hojas pulidas oblongas ó elípticas, de vértice con una punta corta y obtusita, largas de 5 á 6", de peciolo largo de 6 á 8'" ; pedicelos fas- ciculados y axilares ; cáliz sedoso con los segmentos ovales y obtusi- tos, corola 5-fida cortamente eserta, cuyos apéndices igualan las anteras ovoideas: ^Daya globosa, dura, áspera, con 4 celdas y ancha de 1". S. rugosa, Gr. 3. Árbol bastante grande, corpulento, muy ramoso y cuyas ra- mitas, pedicelos y peciolos son pubescentes y color de orin á la vez, con hojas lanceolado-ovales, puntiagudas por ambos estremos, con- cóloras, lampiñas, largas de 3" á 4" con peciolo de 8'" á 12'"; flores blancuzcas, solitarias, cuyos pedicelos son tan largos como los pe- ciolos; sépalos ovales, obtusitos, pubescentes y color de orin, con los 3 interiores coloreados ; corola larga de 5'" y lijeramente eserta; , baya de 3" de diámetro y mas ó á veces menos, de color bruno algo teñido de amarillo, con cascara bastante dura, globosa ú ovoidea, con 8-10 y hasta 12 celdas; de carne blanquecina ó achocolatada, semil- las largas de 8á 10'". S. acliras. Mil. : C. T. V.. 79-365. — Árbol mas DICOTILEÜÓ-NEOS. — CLASE XXXVII. — DIOSPIROÍDEAS- 209 grande todavía y mas corpulento, cuyas ramitas, pedicelos y pecio- los son lijeramente verduzco-pubescentitos, con hojas oblongas ó lanceolado-oblongas, obtusas ú obtusitas por los dos estremos, de cara superior lampiña, mientras la inferior mas pálida es alampi- ñada y plateado-pubescentita cuando son tiernas las hojas, largas de 6" á 4" y hasta 8" ; pedicelos tan largos como los peciolos ; cáliz largo de 3'", con los sépalos ovales, obtusitos y pubescentitos; baya dura, pequeña, globosa 6-locular, ancha de 6'" y mucronada, con las semillas largas de 3'" á 4'". S'. sideroxylon, Gr. G. III. Lúcuma, Juss. Cáliz con 4sépalos en 2 series, baya globosa y pequeña; árbol bastante grande, cuyas ramitas color de orin, se- dosas y alampiñadas, llevan hojas papiráceas, oboval-oblongas ú obovales, obtusas, lampiñas, con las nervaduras pronunciadas y dis- tantes, delicadamente reliculadas, largas de 8"á4"y hasta2", pecio- ladas; flores bastante grandes, de pedicelos fasciculados ó solitarioí?, axilares y ordinariamente mas cortos que los peciolos ; cáliz de sé- palos redondeaditos, abiertos, sedosos y de color de orin, la mitad mas cortos que la corola 6-loba; anteras óvalo-lanceoladas, lateral- mente dehiscentes é iguales con los apéndices aquillados ; ovario 4-locular. L. onidtiflora, A. D. C. — Cáliz con 9-10 sépalos dispuestos en algunas series imbricadas; baya ovoideo-oblonga y grande, de carne amarilla ó colorada ; árbol grande cuyas ramitas velludas y color de orin llevan hojas apergaminadas, oboval-oblongas ó espa- tuladas, de base largamente cuneiforme, mientras el vértice, ancho y redondeado, es mucronado , largas de 8" á 6" sobre 3'' á 2'' de ancho superiormente, de cara superior lampiña, mientras la infe- rior es alampiñada con las venas pronunciadas y distantes, con re- decilla delicada, flores de pedicelos laterales sub-solitarios, pero aproximados y mas cortos que el cáliz, con sépalos redondeaditos, conniventes, sedosos, cuyos interiores son la mitad mas cortos que la corola 5-fida y sedosa, cuyos apéndices aquillados y subulados son iguales á las anteras lanceoladas ; ovario 5-locular ; baya áspera color bruno, larga de 6'', con 2" 1{2 de diámetro, ordinariamente con una semilla fusiforme, ventruda, lustrosa, larga de 2'' 1^2, con la cicatriz ombilical muy grande. L. mammosa, G.: C. T. Y. , 6. G. IV. DiPHOLis m/¿c?/oZm, A.D. C. Achras salicifolia , L. Bu- melia salicifolia, Sw. B. negra, Bert. B. pentágona, Sw. I), negra, Gr. — Bumelia nigra, Sw. — Síderoxylon nigrum-^ Goertn. D. mon- tana, Gr. Biimelia retiisa, Sw. G. V. MiMusops globosa , Goertn. M. bidentata, A. D. C : J/. batata, Crucg TOMO 11 14 210 DlVltílü.N Stí(jUííDA. FA^EROGAMOS. SUB-SECCION 111. — POLIPÉTALOS Ó DIALIPETALOS. b DIVISIÓN.— HIPÓ JINOS. ORDEN l\ — PLEXJROSPÉEMEOtí. CLASE XXXVIII.— VIOLÍNEAS, Familia 85. — SAUVAGESIEAS. — Plantas herbáceas ó fru- tieosas, de hojas simples, enteras ó dentadas alternas ó verticiladas, sentadas ó cortamente pecioladas con dos estípulas fimbriadas, cuyas ñores siempre hermafroditas son solitarias y axilares ó raci- mosas, con el pedicelo mas ó menos articulado por arriba de la base, que está acompañada de ordinario de una bráctea foliácea y constan de un cáliz con 5 pétalos persistentes y comunmente soldados por la base y formando un cáliz seudo-monosépalo, de una corola con 5 pétalos iguales ó desiguales entre sí ; bastantes veces contiene ade- más otra corola interior formada de 5 escamas petaloídeas opuestas á los pétalos, de los cuales están separadas por un verticilo de fila- mentos claviformes ; estambres 5, otras veces 8 y raras veces en número indefinido, libres, cu vas anteras biloculares é inclinadas hacia afuera se abren por una grieta lonjitudinal por cada celda ó por medio de un poro. Pistilo único compuesto de un OA'ario simple unilocular, con muchos óvulos anátropos pegados en 3 placentas pa- rietales y cuyo vértice lleva un estilo simple, delgado y terminado por un estigma pequeñísimo. El fruto es una cápsula cubierta por el cáliz persistente ó por la corola interior marcescente, cuya celda única se abre por 3 valvas cuyos bordes, lijeramente proeminentes por adentro forman 3 tabiques incompletos placentíferos, de dehis- cencia marjenicida, cuyas semillas peqi:eñas y numerosas contienen en el centro de un endospermo carnoso un embrión cito axil casi tan largo como él y cilindrico. Sauvagesia, L. i. Plantas fruticosas ó fruticulosas y por consi- guiente perennes, 2. — Planta herbácea y anual cuyo tallo, de como 6" de alto, mas ó' menos ramoso, derecho ó inclinado, lleva hojas elíptico-lanceoladas, aserraditas, puntiagudas, cuya base se va es- trechando hasta volverse peciolo, corto, largas de \" á 1" 1^2; estí- pulas óvalo-lanceoladas, con largas franjas ; pedicelos axilares, fili- formes, con una sola flor de pétalos blancos y escamas petaloídeas rosadas, cuyo cáliz tiene los sépalos iguales, lanceolados, aguzados, largos de 2"' y casi igualas á la corola y á la cápsula, cuyas semillas son ovoideas; filamentos estériles numerosos. S. erecta, L.: C. T. V.,452. 2. Arbustillo de hojas oblongo-lanceoladas ó lanceoladas, aserra- dito-ondeadas, aguzadas por ambos estreñios, largas de 3'" á 4'" y cuya anchura es variable, cortamente pecioladas, estípulas lanceo- ladü-aguzadas, erguidas, mas largas que el peciolo y con franjas DICOTILEDO.NKOS. — CLASE XXXVlll. — VIOLÍNEAS. 211 muy largas; flores en racimos terminales, las cuales ordinariamente fasciculadas tienen un cáliz con sépalos iguales eliptical-oblongos, obtusitos y de 3'" mas largos que la corola y mas cortitos que las cápsulas, cuyas semillas son globosas; fllamentos estériles muchos. S. elata, Benth. — Vejetal fruticuloso, cuyo tallo delgado, undu- lóse, alto de 6" á '¿' y poco ramoso lleva hojas diminutas, aproxi- madas, lanceoladas, sub-enteras ó algo aserraditas con los dientes apartados, sub-sesiles y largas de 2"'-S'" ; estípulas lineares vol- viéndose franjas; flores en racimos terminales, de cáliz con los sé- palos desiguales, óvalo-lanceolados, marjinados, obtusos, callosos por la base, cuyos interiores son largos de 2'" , mientras los esteriores tienen 1'" solamente y todos mas cortos que la corola; filamentos estériles muchos. >S. sprenc/elii, St-Hil. S. serpilifoUa, Mart. Familia 86.— VIOLARIEAS ó VIOL A JIIÁCF A S.—Vlantas herbáceas ó fruticulosas, con hojas ordinariamente alternas y á ve- ces opuestas, simples y de prefoliacion enrollada, estipuladas y mas ó menos pecioladas. enteras, dentadas ó lobadas, lampiñas ó tomen- tosas y hasta velludas ; flores de ordinario solitarias y axilares, derechas ó cabizbajas, cuyos pedúnculos bi-bracteados , simples ó ramosos, llevan pedicelos saliendo de la axila de una bracteita, soli- tarios, con una sola flor formada de un cáliz con 5 sépalos persisten- tes iguales ó desiguales, de márjen ordinariamente membranácea, libres ó algo reunidos por la base, mas veces prolongándose por de- bajo, cuya estivacion es imbricada y por eso se hallan en 2 series ; corola con 5 pétalos hipójinos alternos con los sépalos é insertos sobre un disco, frecuentemente marcescentes, de estivacion oblicua- mente convoluta, tan pronto iguales entre sí como desiguales, el inferior mas grande y dispuesto á manera de labillo, á veces de base prolongada en espolón ; estambres 5-insertos en el disco y alter- nando con los pétalos, de anteras biloculares abriéndose interior- mente por una grieta doble y lonjitudinal, aplicadas al ovario ó libres, filamentos ordinariamente dilatados en lígula cuyo ápice for- ma, por encima de las anteras, un apéndice membranoso de color y forma variados ; ovario unilocular polispermo y con 3 placentas pa- rietales, cuyo vértice lleva un estilo único, hueco y terminado por un estigma lateral; cápsula con tres valvas y abriéndose con elasti- cidad desde el vértice hasta la base tirando las semillas, cuyo hilo engrosado parece como una carúncula ; endospermo carnoso, pero con mayor frecuencia muj escaso; embrión recto, axil y tan largo como él; de raicilla mirando hacia el hilo, plumula apenas notable y cotiledones mas á menudo llanitos. JoNiDiUM, Yent. 1. Flores pequeñas, nunca blancas, vejetales alampiñados ó lampiños, 2. — Flores blancas, de labillo muy grande, vejetal muy velludo y blanquecino, cuyos tallos, mas ó menos ten- didos por el suelo, divaricados y largos de 8 á 15", son ramosos y ascendientes por el vértice, llevan hojas simples, alternas, subsesi- les, ovales ú óvalo-lanceoladas, aguzadas por ambos estremos, aser- raditas con los dientes terminados por un tuberculito verde pesta- ñoso, velludas por ambas caras, largas de 2" á 2" 1|2 sobre 6 a 9"' de ancho; estípulas lineares, derechas y casi aplicadas al tallo^ '211 DIVltílU>s SEGUNDA. FANERÓGAMOS. memI)ranosa¿ por los "bordes, con una costilla, velludas y pestaño- sas, largas de 2"'-3"' , persistentes. Flores solitarias axilares, cuyo pedúnculo, largo de como V" , se dobla como al nivel de su articula- ción, provista de dos Lrácteas que se parecen á las estípulas, es muy velludo; sépalos iguales triangulares ú óvalo-lanceolados y cuyo vértice se termina por una punta, largos de como 6'" y anchos de como 1 li2"' , teniendo por cada uno de sus lados como 6 á 11 laci- nias verdes obtusas, cilindricas por la base y á la par claviformes, largas de como V" y todas vueltas hacia afuera, lo que hace el cáliz como erizado, y terminadas por un tubérculo amarillento-verdoso ; cáliz acreciente y mu}' velludo; labillo blanco, de limbo ancho de como 1", con figura de una pala, algo acorazonado y mucronadito, con una manchita amarilla triangular en el oríjen de la uña larga de 3'", amarilla, con un tuberculito de cada lado; cápsula ovoidea con tres ángulos poco pronunciados, pubescentes, semillas piriformes parduscas, con manchitas mas pálidas. /. tomentosum. C.T. V., 479. 2. Tallos lampiños ó alampiñados, nunca viscosos , labillo mas o menos moradito ó con estrias moradas, mas ó menos redondo, 3. — Tallo lampiño cuyas ramitas moraduscas son muy viscosas; labillo blanco con una manchita amarilla rodeada por una lista rosada, acorazonada, escutiforme y mucronadito: frútice muy ramoso supe- riormente ó casi simple, alto de 1' 1^2 á 2' 1^2, con hojas lanceola- das, las superiores son con frecuencia alternas y mas pequeñas que las inferiores opuestas y largas de 2", 3" á 4", sobre 6 á 10'" de an- cho, aguzaditas por el vértice y redondeaditas por la base, subsesi- les ó con peciolo muy corto, horizontales, aserradas y además con muchas asperidades por la circunferencia ; estípulas lineares un poco dobladas hacia afuera, lanceoladas, puntiagudas, moraditas y largas de como 1"\ no pronto caduca. Pedúnculo morado filiforme, largo de como 10 á 15'", horizontal y algo doblado por arriba de la articulación; labillo ancho de 2"', sépalos moraduscosesteriormente y con dos surcos pronunciados y laterales; cápsula globosa algo trí- gona, con el estilo persistente, de semillas pequeñas prietas, algo piriformes, con estrias laterales mas pálidas. ./. mscosiim. 3. Planta herbácea ó fruticulosa anual, de tallos difusos largos de 6 á 8", alampiñada, cuyas hojas inferiores son opuestas, ob-lanceo- lado-aserradas, mientras las superiores alternas, algo mas peque- ñas, son lanceolado-lineares, obtusitas y ordinariamente enteras; estípulas diminutas, subuladas y algo tiesas; pedúnculos tan largos como las hojas, sépalos óvalo-lanceolados, puntiagudos y largos de r", lampiños y 3 veces mas cortos que el labillo, cuyo limbo es re- dondo ; cápsulas con pocas semillas, lampiñas, globosas y de color amarillento blanquecino. 7. stríctum, A'ent., C. T. Y. ,478. Familia 87. — BIXINEAH ó BIXINA CEAS. — Árboles mas ó menos grandes ó arbolillos, de hojas alternas simples, enteras, con bastante frecuencia provistas de glandulitas transparentes, cuyo pe- ciolo tiene la base acompañada de dos estípulas que suelen faltar no raras veces. Flores hermafroditas y alguna vez que otra unisexuales por aborto, axilares, en racimos ó en panojas terminales, cuyos pe- dicelos llevan brácteas, compuestas de un cáliz con 4 hasta 7 sepa- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXVTTI. — VIOLÍNEAS. 213 los enteros, tan pronto libres y distintos, como soldados entre sí por la base, de prefloracion imbricada, corola con tantos pétalos cuan- tos sépalos hay, con los cuales alternan: algunas veces suelen faltar; estambres muchos y en número indefinido, cuyos filamentos libres salen de un disco ancho, ocupando todo el fondo del cáliz, y llevan anteras biloculares ; pistilo formado de un ovario libre, unilocular y con muchos óvulos pegados sobre 4 y hasta 1 placentas parieta- les, cuyo vértice lleva un estilo simple mas ó menos largo y á veces 2 ó 4-partido por el vértice. Fruto capsular ó carnudo cuya única celda contiene muchas semillas situadas sobre trofospermos parie- tales, lineares y no muy proeminentes, siempre lonjitudinales, en- vueltas mas ó menos en una especie de pulpa ó arilo, cuyo embrión liomótropo está alojado en el centro de un endospermo carnoso, de cotiledones foliáceos y con la raicilla dirijida hacia el hilo. Análisis dicotómica de las trilms. 1. Fruto dejiiscente, seco ó mas ó menos carnoso, 2. — Fruto siem- pre indehiscente y carnoso; estambres insertos en un disco piríjino. T. I. Prokieas. Trilix crucis, Gr. ProMa criccis, L. — (luaci- milla de costa, Cba. Lcetia apétala, Jacq. Majagua macho, Cba. 2. Fruto capsular seco, cuyas valvas llevan por su medio las pla- centas lineares; estambres hipójinos indefinidos. T. II. Bixeas. A. — Fruto masó menos carnoso, 3. 3. Estambres períjinos; pedicelos articulados por la base ó por arrilia de ella. T. III. Samydeas. TJdodia IfMioides, Gr. Lcetia guidonia, Sw. — Estambres insertos sobre un disco libre. — T. IV. Flacourtieas. — Flacourtia ramo7ic]iii. O. T. V., 520. A. G. I. BiXA , L. — Hojas bastante grandes, acorazonadas, no co- riáceas, muy undulosas, tanto por la circunferencia como por la su- perficie, verdes por ambas caras, con muchísimas glandulitas colo- radas, especialmente por la cara inferior y visibles solamente con la lente; flores bastante grandes, mas ó menos rosadas y á veces casi blancas, cuyos pétalos obtusos y redondos por el vértice son largos de Como 16"'y anchos de 5'"; cápsula rojiza ó de un color blanco amari- llento, oval y algo comprimida, de base mas ó menos acorazonada y de vértice aguzadito, cubierta de muchas púas largas de V" á 1'" 1|2 y (\(i su color; largade 1" l|2á 2" sobre 12 á 14"' deancho : cada unade sus placentaslleva 20 á30 semillas bastante gruesecitas _v que la tie- nen casi llena. Cara interior de la corteza del árbol, que se eleva á 10' ó 15' de altura, siempre verde pálido intoriormente. B. orellana, L. B, platicappa, E. P. : C. T. Y., líU. — Árbol mucho mas grande y corpulento, ordinariamente alto de 20 á 30', muy ramoso y con la corteza de un color mas oscuro y cuya cara interior es roja y .-.uelta un tinte que tiñe los dedos de rojo amarillento; de hojas ut'.nca acorazonadas; algo coriáceas, undulosas por la márjen sola- mente, de cara superior verde manzana y lustrosa, mientras la in- •ior os fusca ó como acanelada, color debido á la presencia en ella te iiii bozo muy cortito y fino y á las glandulitas rojas, pero poco nu- il 214 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. merosas, con la costilla y las nervaduras de igual color, algo mas subido. Flores como la mitad mas pequeñas que las del anterior y mas pálidas. Sépalos del cáliz ovales, algo puntiagudos, largos como V" 1|2 sobre 1|2'" de ancho: pétalos blancos algo rosaditos y de co- lor sucio esteriormente, obovales y de cara superior cóncava y dis- puesta á manera de cuchara, largos de como 10'" sobre 2'" de an- cho. Cápsula verde oscuro con púas cortitas largas de 1{4"', casi globosa, un poco comprimida y con dos surcos laterales, principian- do por la base y juntándose por el vértice obtuso y mas desarrollado que la base, la cual es algo aguzada y con surquitos saliendo de ella y prolongándose como hacia la mitad de ambas caras, apenas del ta- maño de una avellana^ larga de 12 á 13'" y ancha de T" , según el diámetro entero posterior y 10'" por el bilateral; como 1 á 12 semi- llas sobre cada placenta, dos ó tres veces mas pequeñas que las del precedente, de manera que la cápsula no está nunca llena. B. upa- tensis, R. de Gy. B. spherocarpa. T. Onitill© ú onoto de los Indios caribes. G. IL CocLHOSPERMUM GossípfoUwM. C . T. Y.. 65.5. CLASE XXXiX. — CRUCIFERÍNEAS. Familia 88. — CAPAB2J)FÁS ó ÜAPABIDACEAS.--V\^n- tas herbáceas anuales, bisanuales ó vivaces, matas, frútices y hasta árboles, de hojas sencillas, mas ó menos coriáceas, lustrosas, lam- piñas, alampiñadas ó polvorientas, otras veces compuestas y dijita- das, mas Ó menos pubescentes ó lampiñas , pecioladas y siempre alternas, acompañadas de dos estípulas mas ó menos foliáceas, per- sistentes ó caedizas. Flores siempre hermafroditas, solitarias ó en grupos axilares, otras veces dispuestas en racimos, en cimas ó en panojas terminales, cuyo pedúnculo sale de la axila de una bráctea que sin embargo suele faltar bastantes veces, constan de un cáliz con 4 sépalos mas ó menos caducos, raras Aceces soldados entre sí por la base; corola con 4 pétalos y raramente con 5, abiertos, cadu- cos, mas ó menos grandes y unguiculados, ordinariamente alternos con los sépalos; estambres en número definido 4, 6 y hasta 20, otras veces en número indefinido y entonces muchos insertos al rededor de un disco hipójino. Pistilo único formado de un ovario siempre unilocular polispermo y sostenido por un podójino mas ó menos largo y filiforme, cuyo vértice lleva un estilo simple, el cual suele faltar algunas veces : entonces el estigma sencillo y cabezudo está sentado. El fruto es una cápsula siliciforme, pedicelada, unilocular, polisperma, cuyas placentas laminiformes constituyen tabiques fal- • sos en que están pegadas las semillas: se abre en dos valvas; otras veces es una baya unilocular con muchas semillas parietales ó es- parcidas en la pulpa, frecuentemente reniformes, sin endospermo. Tribu l^ — Cleomeas. — Fruto capsular dehiscente; estambres ordinariamente definidos; hojas compuestas. Clecime L. — Siempre 6 estambres, 2. — Estambres en número indefinido; disco hipójino reducido á un anillo de glándulas; pétalos cortamente unguiculados. Planta glandulosa, cuyas hojas tienen 3-5 DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XXXIX i — CKUCIFERÍXEAS. 215 hojuelas ohovalolanceoladas iguales á los peciolos; flores amarillas con pétalos obovales. estambres como 20 igualando la corola; estilo corto; cápsula sentada, áspera y con pelos glandulosos, cujas val- vas son convexas y estriadas. C. viscosa, L. Polanisia tiscosa, De. P. icüsandra, W. A. 2. Insertos sobre el ginoforo ñliforme, 3. — Insertos sobre un dis- co cónico situado por debajo del gin(')foro ó del ovario^ 5. 3. Estivacion de la corola abierta, 4. — Estivacion dé la corola imbricada; segmentos de las hojas 7-5-lanceólados y bastante largos; ñores grandes rosadas cuyos pétalos como 10 veces mas lar- gos que el cáliz son espatulados ; estambres insertos por encima de la base del ginoforo, cuya articulación superior escede mucho la co- rola y es un poco mas corta que los estambres. C . speciosa^ Kth. 4. Hojuelas 5-3 y á veces "7 obóvalo-lanceoladas ó elíptico-lan- ceoládas ; flores blancas cuyos pétalos obovales son 4 veces mas lar- gos que el cáliz ; estambres insertos en el medio del ginoforo^ cuya articulación inferior iguala los pétalos; cápsula linear de 2" á 3" de largo é igual al ginoforo ó mas larga que él. C pentapkyllai L. gy- nandropsis pentapJiyUa, De. Ct. triphylla, De. G-palmipes, De. : G.T. V., 44. 5. Hojas siempre palmeadas ó trifoliadas, 6. — Hojas indivisas!; planta lampiña, difusa, ordinariamente de como 6'' á 8" de alto é inclinada, cuyas hojas largas de como 6'" y lanceoladas, son bien enteras; brácteas conformes casi tan largas como los pedicelos dis- tantes ; estambres iguales á la corola amarilla, cuyos pétalos son largos de 2", cápsula subsesil, larga de 8'", terminada por el estile y persistente, con las valvas convexas. C. procumbens, Jacq. 6. Hojas siempre trifoliadas, 1. — Hojas con mas de 3 hojuelas 6 con 3 raras veces. 8. 7. Planta lampiña; segmentos de las hojas óvalo-lanceolados o lanceolados, enteros ó aserraditos; flores blancas cuyos estambres salen un poco fuera de la corola; cápsula subsesil aguzada por la base. C. polygama, L. C. serrata, L. C. triphyUa, Desc. : C. T. V., 45. — Yerba glandulosa pubescente anual y difusa, cuyas estípu- las son aguijonosas; divisiones de las hojas elípticas cuneiformes por la base y sub-enteras; flores pequeñas axilares, blancas, teñidas de rosado con los estambres inclusos, cápsula subsesil, lampiña y larga de V" 1^2 á 2'"> con las semillas muricadas. C. aculeata, L» 8. Flores blancas; planta pubescente frecuentemente glandulosa, con las estípulas aguijoíiosas; 5-7 hojuelas lanceoladas; brácteas acorazonadas ú aovadas ; estambres largamente esertos ; ovari© mucho mas corto que el ginoforo, pero cápsula madura dos veces mas larga que él que tiene 2 á 3", lampiña ó glandulosa. C. pun- ge ?is, W. C. lieptapliylla, Sw. C. sjmiosa, Macf. C. swart- mana, Wild. C. spinosa, Sw. Flores purpúreas, planta glan- dulosa pubescente con estípulas y peciolos aguijonosos y cuyas hojas son con 3 ó 5 segmentos elíptico-lanceolados; brácteas ovales; ies- tamltres lijeramente esertos ; ovario cortamente estipitado y cápsula 6-12 veces mas larga que el ginoforo que lo es de 2-4'" solamente. €. Jioíistooii. R. Br, C. lieptaphylla, Mey. C. cuhensis, Rich. 216 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. Tribu 2. Capparídeas. — Fruto abajado; estambres siempre muy numerosos ; hojas ordinariamente indivisas ; árboles, arbustos ó frútices. G. I. Crat^va,L. — Baya ovoídeo-globosa, obtusamente mucro- nada, del tamaño de un huevo de paloma y sostenida por un ginó- foro muy largo. Árbol que se eleva á 15 ó 25' de altura ; mas ó menos corpulento y bastante coposo ; hojas lampiñas con los segmen- tos aovados y puntiagudos; estambres 20-24 insertos sobre un disco cilindrico en las flores fértiles y cónico en las masculinas y tres ve- ces mas largo que los pétalos blanquecinos y largos de 6-8'". C. gi- nandra, L.: C. T. V.,46. — Baya globosa no mucronada y del tamaño de una naranja pequeña; árbol de 25 á 30' de altura, muy coposo, cuyas hojas tienen los segmentos anchamente aovados y aguzados; estambres 8-16. C. tapia, L.: C. T. V., 153. G. 11. Capparis, L. — 1. Fruto abayado siliciforme, 2. — Baya ovoidea; cáliz 4-partido, con los segmentos valvados, de ordinario 8 estambres insertos sobre un disco corto y columnario. Árbol de 12 á 25' de altura ó arbusto ramosísimo, cuyas ramas y los pedúnculos son leproso-tomentosos, con vello apretado; hojas lanceoladas, lar- gas de 3-4", cortamente pecioladas, cuya cara superior es lampiña, mientras la inferior pulverulento -pubescente tiene el vello estre- llado; flores blancas en corimbos pequeños pedunculados y axilares por el vértice de las ramitas, de cáliz con segmentos subulados- obtusos por el ápice y largos como de 1'"; eorola de pétalos oval- oblongos, cortamente unguiculados, largos de 3'" é igualando los estambres, baya ovoídeo-globosa velluda, dos veces mas larga que el ginóforo y ancha de 8-6'". C. ferriigina, L. C. octandra, Jacq. 2. Cáliz 4-partido ó 4-fldo, 3. — Cáliz con sépalos distintos, val- vados, yema tretágona un poco arrollada por las márjenes; fruto seco ó reventándose ; arbusto ó árbol bajito que se eleva á 6-10' de altura, cuyas ramas é inflorescencia son densamente escamosas, con hojas lanceolado-oblongas ó elípticas, largas de 2 1^2 á 4", pecioladas y de cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior, leprosa, es plateada ó color de orin pálido: flores blancas y por fin teñidas de púrpura, grandes, en orimbos axilares ó terminales paucífloros, de cáliz con sépalos aovados largos de 6'", ó á veces puntiagudos, pero de ordinario elípticos y obtusos esteriormente, casi mitad mas cor- tos que la corola, cuyos pétalos son leprosos esteriormente, mientras tienen la cara interior lampiña; estambres 16 á 32 esertos; fruto de 3 á 12" de largo, sostenido por un ginóforo largo de 6'" á 2" y con valvas continuas ó toruloso. C. jamaicensis, Jacq. — Variedades: de hojas lanceolado-oblongas, recortadas ó redondeadas por el vér- tice. C. emarginata^ Rich. — De hojas elípticas ó elíptico-lanceola- das, con una punta; fruto continuo ó toruloso. C. siliquosa, L. C. torrulosa, Sw. C. breynia, L. C. interjnedia, Kth. 3. Cáliz 4-partido ó 4-fido, con los segmentos valvados; arbusto ó árbol pequeño de 8 á 15' de altura, cuyas ramitas ó inflorescencia están cubiertas de escamitas blancuzco-rufas; con hojas lanceolado- oblongas, largas de 3 á 4", pecioladas y de cara superior lampiña, mientras la inferior es leprosa; flores blancas en corimbos pedun- DICOTILEDÓNEOS. CLASE XXXIX. — CRÜCIFEEÍXEAS. '21*7 Ciliados y axilares liácia el vértice de las ramitas; de cáliz largo de y"-V" 1^2, con los lóbulos lanceolados, obtusos, convexos y lejirosos por el dorso, 4 veces mas corto que la corola velluda, cuyos pétalos son ovales, cortamente unguiculados y largos como de 6'", tomento- sos, especialmente por el dorso, mientras el cáliz está solamente escamoso; 16 estambres esertos ; fruto largo de 9-10" sobre 3" de diámetro, algo toruloso, color de orin leproso, 6 veces mas largo que el ginóforo. C. amygclciUna, Lam. C. ireyíúa, L.:G.T.Y. 305. 4. Cáliz 4 partido, estambres de ordinario mucho mas largos que la corola, 5. — Cáliz 4-lobo, estambres iguales á la corola ver- dosito-purpurina; arbusto de 1' , ó árbol de 20 á 25' de altura, muy ramoso, y cuyas hojas coriáceas, oblongas ordinariamente con una punta y largamente pecioladas, son largas de 10 á 3", ordinaria- mente algo acorazonadas, con las venas proeminentes por ambas ca- ras, glándula axilar diminuta ó nula y las del cáliz mucho menos desarrolladas que en las demás especies; flores en corimbos termi- nales sub-contraidos, cuyo cáliz largo de Y" tiene los lóbulos re- dondeaditos, pequeños y casi 4 veces mas cortos que la corola lam- piña; fruto corto y largo de 1 á 2", sobre 4 á 6'" de ancho, y sin embargo casi dos veces mas largo que el ginóforo. C . frondosa, Jacq. C. commutata, Spr. C . cunéala. De. 5. Fruto linear, largo de 3 á *7", 6. — Fruto oblongo, tubercula- do, igualando el ginóforo y largo solamente de 1-2" sobre 6 á 10"' de diámetro; arbusto de 8 á 12' de altura, con hojas coriáceas oblongas, aguzadas hacia el vértice y de base sub-acorazonada, cortamente pecioladas y largas de 3 á 4"; glándula axilar ovoidea ó abortada; pedúnculos con pocas flores blancas, cuyo cáliz largo de 4 á 6"' tiene sus segmentos redonditos y grandes, con los esteriores largos de 4'" y los interiores de 6"', pero todos de igual anchura; corola con pétalos obovales, lampiños, dos veces mas largos que los sépalos y mucho mas cortos que los estambres sub-indefinidos. C. xerrucosa, Jacq. C. amplissima, Lam. C. baducca americana, L. 6. Flores rosadas cuyos pétalos oblongos y lampiños son tres ve- ces mas largos que el cáliz y dos veces mas cortos que los estambres sub-indefinidos ; arbusto de 8 á 15' de alto, mas ó menos ramoso y de hojas coriáceas, lampiñas, oblongas ú oblongo-lanceoladas, agu- zadas, cortamente pecioladas y largas de 3 á4", provistas de una glándula axilar obovoídea ; pedúnculos con pocas flores, cuyo cáliz largo de 3"' tiene sus segmentos redondeaditos, de como 20 á24 es- tambres; fruto largo de' 4" é igualando el ginóforo. C. eustacMana, Jacq. C. cyno2)]iallop]iora attenuata, Gr. — Flores grandes blan- cas ó teñidas de color de rosa, cuyos pétalos grandes obovales son tres veces mas largos que el cáliz y mas de un tanto mas cortos que los estambres indefinido.-; arbusto de 8 á 10' ó árbol de 15 á 25' de altura, cuyos ramos largos y flexuesos parecen á veces como sar- mentosos, son lampiños y sin escamas; hojas coriáceas, lampiñas oblongas, heteromorfas y cuya forma está entre oblonga, orbicular y linear, de cara superior lustrosa, mientras la inferior es opaca; obtusas y cortamente pecioladas, largas de 2-3", con una glándula axilar oblonga: pedúnculos con pocas flores, cuyo cáliz largo 4"' es 218 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓaAMOS. con segmentos redonditos, dividido casi hasta la base y con los dos sépalos esteriores mas pequeños ; fruto mas largo que el gijióforo ó igualándole ; largo de 3 á 1" sobre 4-8'" de ancho, con valvas conti- nuas ó torulosas y abriéndose gradualmente por uno ó por ambos lados, colorado interiormente. C . cynophallojíliora, L. C. flexuosa, I.. : C. T..V., 329. — Variedades: con hojas oblongas, oblongo-elíp- ticas ú oblongo-lanceoladas, obtusas ó recortadas, glándula axilar oblonga y sub-trunca; fruto toruloso. C. lavigata, Mart. — 2. Hojas redondeaditas, glándula axilar diminuta ó aborta. C. latifiUa. — 3. Hojas lineares ó lanceolado-lineares, de cara inferior á veces lepro- sa. C. saligna, Valh. C. loTKjifoUa, Sw, C. liastata, L. G-. III. MoRiNSONiA americana, L. : C. T. Y., 690. Familia 89. — CRUCIFERAS. — Plantas herbáceas ordina- riamente anuales, bisanuales ó vivaces y fruticulosas, cuya raiz es á veces carnosa, bastante gruesa, suculenta y comestible, perpendi- cular, de forma y tamaño variados: hojas simples, enteras ordina- riamente, pero á veces lobadas, sinuosas ó dentadas, lampiñas, mas ó menos glaucas, pubescentes ó peludas, mas ó menos pecioladas y siempre alternas. Flores siempre hermafroditas en espigas, corim- bos ó panojas terminales, las cuales constan de un cáliz con 4 sépa- los caducos, casi iguales y bastante espesos, dos de ellos suelen presentar bastante á menudo un hueco por la base; corola con 4 pétalos dispuestos á manera de cruz y uníiüiculados ; 6 estambres tetradínamos, cuva inserción de todos los filamentos ó solamente de dos ó de dos pares de ellos está acompañada por una glandulita si- tuada entre ellos y los pétalos, la cual suele faltar bastantes veces. Pistilo único formado de un ovario simple supero, mas ó menos alargado, bilocular, con algunos óvulos, terminado por un estilo mas ó menos largo, á veces persistente, pero que suele faltar no rara vez, estigma simple ó bílolio. El fruto es una silicua ó una silí- cula con dos celdas poli ó paucispermas y abriéndose por dos valvas, las cuales no se desprenden algunas raras veces y el fruto parece indehiscente y es monospermo : por fin otras veces está formado de artejos que se separan sin abrirse; las semillas están asidas por cada lado del diafragma que constituye el tabique placentario falso, el cual divide las dos celdas : embrión diversamente encorvado v sin endospermo, con una raicilla corva. Una silicua, 2. — Una silícula, 3. 2. Silicua separándose transversalmente en artejos ópiezas unilo- culares y unispermas. T. I. Lomextáceas. — Cakile (Fqualis, L'her.: C. T. V., 274. — Silicua bastante larga y con dos valvas. T. II. Si- licuosas. — NasUtrtium ofjicinale, R. Br. : C. T. Y., 276. — Si- najns drassicata, L. : C. T. Y., 29-273-457. — Brassica olerácea, L. : C. T. Y., Tn.~Raphan:.3 raphanistntm, L.: C. T, V.,694. 3. Fruto redondeadito mas d menos comprimido, corto, de tabique linear, silícula. T. III. Síliculosas. — Lepidium, L. — Yerba mas ó menos ramosa, de tallo derecho y alia de I' á 1' 1|2, lampiña y con hojas lanceoladas, ordinariamente aserradas: flores en raci- mos terminales, elongados, diandras; silículas casi orbiculares, sin alas y recortadas: cotiledones acumbentes. L. TÍrginianvm , L. : DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLl. — NINFEÍNEAS. 219 C. T. V., 275. — Yerba cuyo tallo derecho se eleva hasta2' ó2'l|2, lampiña, cujas hojas inferiores son pinatisectas peciolaclas. Flores en racimos elongados ó casi en cimas siempre tetradínamas: silícu- las casi orbiculares, aladas y recortadas por el vértice, semillas oblongas y cotiledonesincumbentes. L. sativum, L. : T. T. Y. .215. CLASE XL. — PAPAYERÍNEAS. » Familia 90. - PAPA VBIílCF AS. — nautas herbáceas anua- les ó bisanuales, matas ó raras veces arbustos, cuya savia lechosa es blanca ó amarilla, algunas veces acuosa solamente, con hojas simples mas ó menos lobadas ó sinuadas, sésiles ó pecioladas, lampiñas ó pu- bescentes, siempre aliernas. Flores bastantes veces muy grandes y pintadas de los mas hermosos colores y siempre hermafroditaSj so- litarias en el ápice de largos pedúnculos terminales; se componen de un cáliz con dos y rarísimas veces tres sépalos caducos y cónca- vos; corola con 4 ó 6 pétalos planos ó algo cóncavos, plegados ó me- jor ajados antes de desplegarse, los cuales suelen faltar alguna vez que otra ; estambres hipójinos indefinidos y muchos insertos en der- redor de un disco amarillo que sostiene el ovario ; algunas veces son solamente 4-8-10. Pistilo único formado de un ovario simple, supero y libre, con una ó algunas celdas polispermas, cuyo ápice está coro- nado por un estigma escutiforme y asurcado ó con radios, otras ve- ces un estilo mas ó menos corto sale de éí y se termina por un es- tigma partido ó lobado. El fruto es una cápsula silieuiforme, con una ó algunas celdas lejítimas ó falsas, polisperma y abriéndose por poros situados por debajo del estigma; otras veces su dehiscencia se hace por medio de 2 ó 3 ventallas: semillas pequeñas pegadas en unas placentas laterales que forman los tabiques falsos y verticales y cuyo embrión pequeño y axil está alojado en el vértice de un endospermo carnoso. Argemone mexicana, L. : C. T. Y., 477-565. — Boceouia frutescens, L. : C. T. Y., 827. ORDEN II. — f'LA^IYDOBLÁSTEAS. CLASE XLI. — NIXFEÍXEAS. Familia 9i\.-- NINFEÁCEAS. — Primorosas plantas herbá- ceas, acuáticas, vivaces, cuyas grandes hojas son simples, enteras, dentaditas ó sinuosas, ordinariamente discoideas, acorazonadas y un poco abroqueladas, con peciolos muy largos que salen alternos del rizoma que echa sus raices en el fondo de los rios ó de las lagunas; flores primorosas y mas ó menos grandes, cuyas varias partes son distintas las unas de las otras, ó en parte reunidas por causa del des- arrollo del torus ó disco, solitarias en el ápice de un pedúnculo muy largo y estra-axilar, nadantes siempre, así como las hojas, en la su- perficie del agua y formadas de un cáliz con 4-6 sépalos foliáceos, á veces persistentes, corola con muchos pétalos dispue>tos en algunas series, muchísimos estambres libres, cuyas anteras lineares v bilo- 220 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEKÓGAMOS. culares son introrsas. Piblilo formado de algunos carpelos mas ó me- nos envueltos en una prolongación del tálamo, los cuales son otros tantos ovarios libres, cuyo ápice se termina en un estilo simple ó soldados todos entre sí, constituyendo así un ovario único coronado por tantos estigmas dispuestos á manera de radios cuantas celdas hay. Fruto capsular conteniendo muchas semillas pegadas en sus paredes y laterales, carnoso éindehiscente; esas semillas están com- puestas de un tegumento propio, epispermo, grueso y algunas veces en redecilla, de un endospermo grueso, persistente, harinoso y qué con- tiene en su vértice un embrión irregularmente globoso ó napiforme, contenido en el saco embrionario, con la raicilla vuelta hacia el hilo y los cotiledones espesos. Nynphcea, L. — 1. Ápice de las anteras prolongado por un apén- dice largo del conectivo; estípulas diminutas y distintas, flores abriéndose de dia, 2. — Conectivo prolongándose muy poco por en- cima del ápice de las celdas de las anteras de los estambres esterio- res; estípulas reunidas en la vaina peciolar ; flores abriéndose de noclie. Planta de hojas acorazonadas algo abroqueladas, sinuoso- (lenTadas, ó á veces enteras, de cara inferior con los nervios algo acanalados ; flores blancas ó amarillo-pálidas, con los sépalos sin nervaduras proeminentes, conectivo" de ápice obtuso; apéndices de los estigmas claviformes y por fincircularmente inclinados. iY. rud- gea?ia, Mey., N. Manda, Planch. : C. T. Y. 310. — Yariedad : pe- ciolo con un anillo de pelos ciñendo el vértice; celdas de las anteras estrechamente lineares j cuya anchura es igual á la de la márjen del conectivo llano ; hojas enteras. iY. amazomcm, Mart. 2. Hojas grandes acorazonadas, un poco abroqueladas, sinuoso- dentadas, con las venas formando redecilla en la cara inferior, or- dinariamente purpúrea, lampiñas y lustrosas; flores blancas cuyos sépalos no tienen nervaduras proeminentes, pero sí algunas líneas purpúreas : estambres esteriores mucho mas largos que los interio- res; apéndices de los estigmas cortos, cónicos y puntiagudos. N. ampia. De, : C. T. Y., 310. — Yariedades: hojas con los dientes puntiagudos. N. phwiieri. Plan. — Sépalos y pétalos oblongos un poco puntiagudos, como de 1" de largo, apéndices de las anteras esteriores largos de 2'" v del ancho de la antera. JV. parrijlora. Familia ^%—NFLbMBONE AS. — Vld^xii^^ acuáticas herbá- ceas, cuyos peciolos y pedúnculos salen de un rizoma mas ó menos grueso que se halla en e] fondo de las lagunas ó riachuelos; hojas abroqueladas, anchas, orbiculares, enteras, emersas, de prefolia- cion enrollada; flores grandes, solitarias en el ápice de un pedún- culo largo y que sale bastante por fuera del agua, blancas, rosadas ó amarillas, cuyo cáliz tiene sus sépalos libres y colgantes; corola formada de muchos pétalos oblongos, estendidos y dispuestos en al- gunas series. Muchísimos estambres, cuyos filamentos van prolon- gándose por encima de la antera y forman un apéndice pequeño. Muchos pistilos hay alojados en los alveolos de un receptáculo bas- tante desarrollado, compuestos cada cual de un ovario libre unilo- cular, con 1 ó con 2 óvulos colgantes y cuyo vértice lleva un estilo corto terminado por un estigma escutiforme. El fruto es una espe- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLIl. — BERBERIDÍNEAS. 221 cié de nuez monosperma pequeña y alojada en el alveolo correspon- diente; embrión sin endospermo, cuyos cotiledones espesos ciñen la plúmula. Xelumbmm luteum, W. ORDEN III. — AXOSPÉRMEAS. CLASE XLII. — BERBERIDÍNEAS. Familia 93. —MENISPÉRMFAS ó MENISPERMACFAS. — Plantas fruticosas trepadoras ó enredaderas, ó arbustos mas ó menos tomentosos y frútices, de hojas simples mas ó menos lo- badas ó enteras . pecioladas , lampiñas , pubescentes , tomentosas y velludas, ordinariamente palmatinervias , sin estípulas. Flo- res siempre unisexuales, de ordinario dioicas, en racimos ó espigas axilares ó terminales bracteadas, formadas de un cáliz de preflora- cion imbricada, con muchos sépalos dispuestos por series de á tres, lo o^ue sucede también para los pétalos, que suelen faltar alguna vez que otra. Hay muchos estambres monadelfos, otras veces son li- bres y en número determinado igual al de los pétalos, ó duplo y hasta triple de él. Muchos pistilos libres ó soldados entre sí por el lado interno, con los ovarios distintos uniculares y contiendo un óvulo único y lateral, con un estilo corto terminado por un estigma simple. Fruto drupáceo monospermo cuyas semillas reniformes con- tienen un embrión ordinariamente alojado en un endospermo. Tribu l^ — Coculeas. 3 hasta 12 carpelos campilótropos; em- brión contenido en un endospermo con figura de herradura; raicilla dirijida hacia el rudimento supra-basilario del estilo, cotiledones lineares y contiguos. Coculus, De. — Anteras al principio 4-loeula- res, después bílobas y abriéndose por una grieta confluj^ente, obli- cuamente lateral y á la par vertical; estilos cilindricos y ganchosos; mata de hojas oblongas ó elíptico-lanceoladas, lampiñas, cuyas ve- nitas están en redecilla muy fina y las dos nervaduras principales algo distantes de la base, enteras, coriáceas y largas de 1-8", pecio- ladas: pétalos diminutos, escamiformes, opuestos al cáliz y á los estambres interiores que igualan ; anteras globosas tan largas como el filamento espeso; drupas ovales redondeaditas, largas y anchas de 5'". C. do7ningensis , De. — Anteras biloculares cuyas celdas distantes se abren por una grieta lateral; estilos foliáceos é inclina- dos; mata de hojas acofazonado-triangulares, 5-7-nervias, mem- branáceas y ordinariamente largas de 1 lj2 á 2", lampiñas ó dimi- nutamente pubescentes, largamente pecioladas; flores distantes en racimos delgados, simples, mas largos que el peciolo y cuyos pétalos, tan largos como los sépalos interiores, son obovales; celdas de las anteras lineares distantes y separadas por un conectivo ancho ; 3 ovarios. C . tamoides, De. C. paíiper, Gr. Tribu 2. — Cisampelídeas. Carpel solitario: embrión alojadoen un endospermo espeso y en forma de herradura, de cotiledones linearesy contiguos. CiSAMPELos planta fruticulosa enredadera, cuyos ramos delgados son largos de 1 ó 2 varas y hasta mas, pubescentes, con 222 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEKÓGAxMOS. hojas acorazonado-redondas, ó como arriñonadas, casi discoídeaís, algo abroqueladas, de cara superior lustro>^a y verde-amarillenta, mientras la inferior es tomentosa, largamente pecioladas: flores masculinas en corimbos compuestos y pedunculados, mientras, que las femeninas están enracimes ó espigas y en fascículos saliendo de la axila de una bráctea, redondeadita y mas larga que ellas. Drupa sub-globosarojay peludita. C.pareira,L.: C. T. ¥.,369-120. — Varie- dades : 1 . Hojas abroqueladas pubescentes por ambas caras. C .2Jarei- ra, L. — 2. De hojas abroqueladas, alampiñadas por la cara superior, mientras la inferior es tomentosa. C. microcarpo., De. — 3. De ho- jas cuyo peciolo sale de la base pubescente, en especial inferior- mente, ó lampiñas. C . caa'peha, L. — Mata ó frútice de tallo dere- cho, casi nunca ramoso, muy tomentoso en todas sus partes y alto de r lj2 á 3'; algunos tallos salen aveces de la misma raiz: de un color blanco sucio ó aleonado. El individuo femenino es ordinaria- mente algo mas alto que el masculino, de hojas ovales redondeadas, algo ondeado-sinuosas por la circunferencia, apenas escotadas por el vértice, con un rejón poco pronunciado, de cara superior mas verde que la inferior, blanquecino-aleonada, largas de 2 1|2 á 2'' y anchas de 2 i{4 á 1 lf2, sin contar el peciolo que tiene 4 á 5'", con las nervaduras bien pronunciadas por la cara inferior, todas saliendo de la base y dispuestas á manera de abanico, muy poco ramificadas, y visibles también por la cara superior, porque las partes que cor- responden á ellas están mas pálidas; las del masculino difieren de aquellas par ser mucho menores, elípticas, mas ó menos ovales, largas de 2 1^2 á 2", sin el peciolo que tiene 8 á 10'", y anchas de 1 2[3, 1 1{2, 1 1|4". Flores femeninas en espigas axilares, ordina- riamente mellizas, largas de 1 2|3 á 1 1{2", cuyo eje en zigzag lleva en cada ángulo saliente una bráctea foliácea, oval-acorazonada, an- cha como de 3 á 4'", que tiene en su axila un grupo de 6 á 8 flores casisentadas, mientras las masculinas son en pequeñas cimas, mas ó menos umbeliformes ó apanojadas, situadas en el ápice de un pedún- culo filiforme larffo de *7 á 9"', axilares v en número de 6 ordinaria- mente en cada axila de las hojas. C. vestita, H. M. C. pcmnosa, Benth. CLASE XLIIÍ. — MAGXOLÍXEAS. Familia "d^.—MIRISTICEAS ó MIRÍSTICA CF AS. —Arhuü- tos ó árboles ramosísimos, con hojas sencillas, coriáceas, pecioladas, sin estípulas, enteras, mas ó menos oblongas ó elípticas, lustrosas y lampiñas, cuyas flores apétalas siempre dioicas, axilares ó termina- les, solitarias ó agrupadas, se componen de un cáliz monosépalo con tres divisiones valvaries, tanto las masculinas como las femeninas; en las primeras hay desde 3 hasta 12 estambres, monad elfos con las anteras reunidas y á veces soldados entre sí, abriéndose por un sur- co lonjitudinal, mientras que las segundas contienen un ovario libre, unilocular, con un solo óvulo derecho y que lleva por el ápice un estilo muy corto terminado por un estigma lobado. Fruto drupáceo DlCüTlLEDÜ^EUír. — ULASE XLUi. — MACtNOLÍNEAS. 223 particular cuya .parte carnosa se abre en dos valvas cuando está maduro para dar salida á una especie de hueso cubierto de una con- cha crustácea adornada por un arillo dividido en muchas lacinias y que parece como cera de color rojizo anaranjado; semilla gruesa cuyo embrión pequeño, recto y homótropo está alojado en el vértice de un endospermo grueso, duro, marmóreo y ruminado. Myristica, L. -^ Anteras 9-12 linearos sostenidas por una co- lumna cilindrica cortamente estipitada; pocas flores axilares ó una sola. Árbol muy ramoso como de 30 á 40' pies de altura, de hojas eliptical-oblongas, cuspidadas, lampiñas, lustrosas, largamente pe- cioladas, con 8á 10 pares de venas primarias; flores cabizbajas cu- yas masculinas son corimbosas, mientras las femeninas son solita- rias: cáliz ovoideo y trífido ; drupa globosa con una punta en el vértice, de color y tamaño de un albaricoque pequeño, colgante. M. moscliata, Thumb. : C. T. V.,235. — De ordinario tres anteras so- lamente, cuya columna es cilindrica y estipitada; flores fasciculadas en panojas paucífloras. Árbol grande que se eleva á 60' de altura, cuyas hojas son lineares, oblongas, alampiñadas, de base redondea- da ó aguzada y de vértice cuspidado, pecioladas, largas de 4 á 8" sobre 8'" á 2" de ancho, cuya cara inferior es color de orin, con 24 ó 30 pares de venas primarias. Los hacecillos de flores en número de 5 á 15, son envueltos antes de la floración en una bráctea grande, pero cada flor está sin bráctea alguna especial; cáliz infundibuli- forme, trífido, velludo esteriormente y lampiño interiormente; baya globosa, lonjitudinalmente aquillada y de 6 á 8'" de diámetro. J/. sicrinamensis, Rol. — M. fatua, Sw. Familia 95. — ANONACEAS. — Arbustos ó árboles mas ó me- nos grandes, pero de ordinario no muy corpulentos ni muy altos tampoco, pero sí muy ramosos y bastante copudos, con hojas senci- llas, masó menos lanceoladas, oblongas, ovales, elípticas, enteras, mas órnenos coriáceas, pecioladas, lustrosas, lampiñas, alampiña- das ó pubescentes, sin estípulas. Flores siempre hermafroditas, ter- minales ó laterales y opuestas á las hojas ó axilares, las cuales se componen de un cáliz persistente con 3 sépalos ó 3 segmentos pro- fundos y pequeños ; de una corola con 6 pétalos dispues"'os en 2 se- ries y algunas A'eces reducida á 3. Muchos estanibros hipójinos insertos en derredor de un disco, cuyos filamentos cortísimos llevan anteras casi sentadas con las celdas laterales ó estrorsas; pistilo compuesto y .formado de muchos ovarios pegados en derredor de un eje central, súperos, uniloculares , mc^aospermos y cuyo vértice lleva un estigma sentado. Fruto compuesto, á veces bastante grue- so, formado por muchas bayas uniloculares y monospermas, reuni- das y soldadas entre sí, y sostenidas por un eje que no es otra cosa sino una prolongación algo carnosa y cónica del pedúnculo, es liso, escamoso ó áspero; las semillas cuyo tegumento propio es crustáceo, lustroso y formado de dos láminas, contienen un embrión pequeño alojado hacia el vértice de un endospermo grueso y ruminado, es decir, con muchísimos surcos profundos y en que penetra el epi¿- permo. Tribu 1\ — Anóneas. — Cai'pelos por ñn soldados entre sí y 224 DIVISIÓN SEGüXDA. FANERÓGAMOS. formando un sincarpio de forma v tamaño variados ; en bastantes especies el polen está en masas coherentes y forma así polinias dis- puestas á manera de rosario. Anona, L. — 1. Corola con 6 pétalos bastante grandes, cuyos 3 interiores son bien notables; vejetales de hojas siempre verdes y persistentes, 2. — Corola con 3 pétalos solamente, la serie interior estando reducida á 3 escamitas diminutas ó faltando enteramente, de ordinario carnosas ; vejetales no siempre verdes y cuyas hojas son en mayor parte deciduas, 6. 2. Pétalos esteriores anchamente aovados, con una punta y ape- nas mas largos que los interiores redondos, 3. — Pétalos esteriores, obtusos y bastante mas largos que los interiores, 5. 3. Sub-acorazonados por la base y lampiños, 4. —No acorazona- dos y tomentosos; árbol bajito que se eleva á 15 ó 20' de altura, con hojas oblongas y por fin lampiñas, cuyas flores tienen los pétalos esteriores verdosos y largos de 1", mientras los interiores son ama- rillos; fruto globoso, aerolado y con 4-5" de diámetro, cuyas areolas se prolongan en púas diminutas y carnosas. A. montana, Macf. — .4. mtiricata, Variedad Dun. 4. Fruto á veces muy grueso, irregularmente cónico, obtuso, areolado y cuyas areolas se prolongan en púas carnosas y en- corvadas. Árbol frondoso que se eleva á 15-25' de altura, con hojas oblongas, pecioladas, lustrosas y por fin lampiñas; fiores bastante grandes cuyos pétalos esteriores, largos de 1 á 2", son amarillentos ó verdositos, mientras los interiores son amarillos ó rojos. Fruto de 6 á 10" de largo sobre 3 á 5 de ancho por la base, con la carne blanca v las semillas negras y lustrosas. A. muricata, L. : C. T. y., 91-576. — Fruto cónico, obtuso, liso y sin púas; árbol pequeño de 10 á 12' de altura, ramoso y de hojas lanceolado-oblon- a'as y lampiñas; pétalos esteriores largos de 1" y verduscos esterior- mente. A. laurifolia, Dun. 5. Pétalos esteriores aovados, obtusitos, largos de li2'", amari- llentos esteriormente y un poco ásperos, lisos interiormente, blan- cos y con una mancha roja por la base, mientras los interiores son mucho mas estrechos , algo mas cortitos y de cara interior mas ó menos roja y la esterior blanca. Árbol frondoso de 10 á 15' de al- tura, con hojas oblongas ó elípticas con una punta, lampiñas, con un peciolo bastante grueso y corto, con los dos lados de la base do- bladitos por afuera en la parte que corresponde al peciolo. Fruto aovado, globoso, liso y lijeramente areolado, amarillento y como de 2" de diámetro 6 mas, con la carne amarillo subido y las semillas amarillentas. C. palustois, L.: C. T. V., 436. — Pétalos esteriores oblongos, obtusos y verduzcos, largos de lt2-l", é interiores rojizos, dos veces mas cortos y redondos ; árbol de 8 á 12' de alto, bastante ramoso y de hojas oblongas, lampiñas y aguzadas por el vértice ; fruto sub-globoso, tuberculado, verduzco, como de 4" de diámetro y con las semillas negras. A. mucosa, Jacq. — A. obfusifolia, Tuss. 6. Fruto tuberculado y globoso, 7. — Fruto no tuberculado pero sí areolado, liso y como en forma de corazón, amarillento, un poco teñido de rojo, con la carne blanco-amarillenta y las semillas ne- DICOTILEDÓNEOS. CLASE XLIII. MAGNOLÍNEAS. 225 gras. Árbol muy frondoso, de copa redonda, alto de 35 á 25' con hojas oblongas ú oblongo-lanceoladas, largas de 5 á 1" sobre 1" á 1" 1|2 de ancho, ásperas ó por fin lisas, no lustrosas y de un color verde amarillento. A. reticulata, L.: C. T. V., 92. 1. Fruto ovoídeo-globoso ó globoso como de 3 á 4" de diámetro, amarillento-verdoso y blanco, con tubérculos distintos, proeminen- tes, espesos, redondos y de 2-5'" de diámetro, con la carne blanca ó algo amarillenta y las semillas bruno-oscuro. Árbol no muy coposo, de ramas bastante apartadas las unas de las otras y alto de 15 á 20', con hojas lanceolado-oblongas, glaucas y de cara inferior pubescente ó alampiñada; pétalos largos de 8 á 12'" sobre 1-2'" de ancho, ver- duzcos, con un hueco purpúreo por la base interiormente. A. sqtca- nimosa, L. — A. cherwiolia, Mili. C. T. V.. 93. Tribu 2. Xylopieas. Fruto con carpelos distintos y pétalos val- vados. G. I. Xylopia, L. 1. Bráctea superior envolviendo por parte el tubo calizinal, 2. — Brácteas deciduas y un poco apartadas del cáliz cupuliforme, sedoso y alampiñado, cuyos 3 lóbulos llegando hasta el medio son redondos, obtusos y 4 veces mas cortos que la corola sedosa, y cuyos pétalos esteriores son largos de 4-6'". Árbol como de 12 á 15' de altura, con ramas largas y no muchas, de hojas lanceoladas aguzadas en punta obtusita ó á veces recortadas y largas de 2-3" sobre 1" de ancho, de cara inferior densamente peluda, en especial cuando son tiernas, cortamente pecioladas. X glabra, L. 2. Cáliz cupuliforme, pubescente, cuyos 3 lóbulos, redondos y obtusitos llegan hasta el medio y son 4 veces mas cortos que la co- rola sedosa cuyos pétalos esteriores son largos de 4'". Árbol como de 15 á 25' de altura, con ramas largas horizontales bastante apar- tadas las unas de las otras, cuyas hojas como dísticas y horizontales son lanceolado-lineares, aguzadas por el vértice y redondeado-aco- razonaditas por la base y largas de 3 á 5" sobre 1" á 1|2 de ancho, de cara superior lampiña, mientras la inferior es pubescente ó alam- piñada, cortamente pecioladas ; carpidlos 2, comprimido-ovoideos, sentados con 4-5 semillas ó 5 á 10 carpidlos obovales y estipitados, mucho mas pequeños y solamente con 2 semillas. X. Jamaicensis, Griesb. X. muricata, L. X. salicifoUa, Kth. X. frutescens, Aub.: C. T. V., 271. — Cáliz cortamente campanudo, 3 dentado ó á veces 3-ñdo, con los dientes puntiagudos y 4 á 6 veces mas cortos que la corola, cuyos pétalos esteriores tienen 8 á 16'" de largo; ár- bol pequeño, de hojas oblongo-lanceoladas, con una punta, largas de 3 á 6" sobre 1-2" de ancho ; flores sedosas ; carpidlos estipitados, encorvado-oblongos, sub-cilíndricos, largos de 8'" y anclios de 3'", obtusos, redondeados por la base hacia el ginoforo, largo de 2"' y con 2 ó 4 semillas. X grandiflora , Aub. X. Ion gif olía, A. D. C. X. Ctibensis, Kich. Uñona acutifolia, Dun. U. xylipioides, Dun.: C. T. V.,272. G. 11. Cananga odorata,^. Hook. Xylopia aromática, Mart. — Uñona odorata y leptojjctala, l)un. U. zelanica, Aub.: C. T. V. 456. G. III. MoNODORA myristica, Dun. Uñona myristica, Dun. Xglopia iindalata, P. Ti. TI ahzelia myristica, A. De: C. T. V., 270. TOMO IJ 15 226 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. Familia 94. — MAGNOLIÁCEAS. — kvhM^io^ ó árboles mas ó menos grandes, pero de ordinario bajitos, con hojas simples, co- riáceas, enteras, persistentes, bastante grandes, lustrosas, peciola- das y con estípulas acompañando á la inserción del pecioloy deci- duas, mas ó menos envainadoras; flores siempre hermafroditas axilares ó terminales solitarias ó dispuestas en racimos mas ó menos furnidos, las cuales constan de un cáliz con 3 ó 5 sépalos caducos y mas cortos que la corola algunas veces muy grande, formada de 9 hasta 27 pétalos dispuestos en algunas series : muchos estambres libres é hipójinos, cuyos filamentos cortos llevan á veces la antera pegada por su borde é insertos en derredor de un receptáculo común á los pétalos ; pistilo compuesto, cuyos ovarios muchos uniloculares, superes y agrupados en derredor de un eje central y corto, especie de receptáculo, llevan en el ápice un estilo corto con su correspon- diente estigma. El fruto es un cono formado de muchas cajitas com- primidas, libres, uniloculares, monospermas, abriéndose por dos valvas, cuyas semillas provistas de un arillo están pegadas en el ángulo interno de la celda y cuelgan de un funículo: otras veces se compone de algunas pocas cápsulas ó carpidios agrupados circular^ mente y en forma de estrella ó dispuestos en capitulo mas ó menos oblongo ; en fin, algunas raras veces consiste en unas bayas dispues- tas circularmente y soldadas entre sí; embrión diminuto y alojado hacia el vértice de un endospermo carnoso. Tribu l\ — Iliceas ó Winteraceas. Cárpelos dispuestos en verticilo, rarísima vez solitarios por causa de aborto, hoja;> con puntitos transparentes. Illicium anistitm, L.: C. T. V., 268. Tribu 2. Magnolieas. Carpelos dispuestos á lo largo del eje á manera de espiga; hojas sin puntos XvSiX\s\)QiVeTíies. Talauma Plu- mieri, De. Magnolia Flumieri, Sw.: C. T. Y., 90. CLASE XLÍV. — RENÜNCULÍNEIS. Familia 95. — BILLFNIACFAS. — Árboles, frútices, ó sub- frutices mas ó menos sarmentosos ó abejucados con hojas siempre alternas, muy rara vez opuestas, simples, peninervias, enteras ó dentadas, mas veces coriáceas ó papiráceas, persistentes, ora pecio- ladás, ora sentadas, de base angostada y persistente, á veces abra- zadora, y cuja mitad superior es bastantes veces caediza; flores solitarias ó en racimos y en panojas terminales, las cuales constan de un cáliz con 5 sépalos persistentes, cuyos dos son esteriores, mientras los tres otros son interiores, de cstivacion imbricada, así como la corola cuyos pétalos son 5, deciduos, hipójinos y dispuestos en una sola serie. Muchos estambres insertos en el disco, cuyos fila- mentos de base plana j de ápice dilatado son ubres ó poliadelfos y simétricamente dispuestos en derredor de los carpidios ú otras ve- ces unilaterales, llevan anteras adheridas abriéndose de ordinario por una grieta lonjitudinal, introrsas ó laterales, pero jamas es- trorsas. Ovario formado de 2-5 carpelos que suelen volverse un ovario único, sea por aborto, sea por haberse soldado entre sí, uni- loculares y terminados por un estilo simple con su estigma entero. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLIY. — RENUNCULÍNEAS. 221 El fruto es bacciforrae ó capsular con 2 valvas libres ó reunidas y aguzadas por causa del estilo persistente; semillas ovales dispuestas en dos series j situadas en el ángulo interno de las cajitas ó de las celdas, son algunas ó dos solamente y hasta solitarias por aborto, tan pronto desnudas como vestidas de un arillo pulposo, de epis- permo bastante duro, con un embrión diminuto, erguido, alojado por la base de un endospermo carnoso ó sub-cartilajinoso. G. I. Tetracera colmilis, L. Trigarea áspera, Desc, etc.: C. T. Y., 408. G. II. Davilla rugosa, Poir. G. lil. Curatella Americana, L. Chaparro. Familia 96. — RENUNCULACEAS. — Plantas herbáceas anuales, bisanuales ó vivaces, cujas raices ordinariamente fibrosas están algunas veces tuberculadas y fasciculadas, y matas ó frútices samentosos ó trepadores, rarísimas veces arbustos, con hojas sim- ples mas ó menos lobadas ó enteras y mas ó menos pecioladas, ra- dicales ó caulinares, otras veces compuestas y hasta descompuestas, alternas de ordinario y sin embargo á veces opuestas. Flores siem- pre hermafroditas , cuya inflorescencia varia mucho : en efecto son solitarias y axilares o terminales, otras veces en espigas racimos ó panojas y se componen frecuentemente de un cáliz petaloídeo, poli- sépalo, que á veces está solo ó acompañado de un involucro foliáceo mas ó menos apartado de él ; corola con 5 ó mas pétalos regulares ó con frecuencia irregulares, con forma y figura muy variadas y muy estrañas, y á veces se cuentan hasta 20 de ellos, cuando son regulares 5 solamente, son unguiculados y llevan algunas veces un hoyo ó una laminita en su base ; otras veces suelen faltar ente- ramente y el cáliz se ha vuelto entonces petaloídeo. Hay muchos estambres libres, insertos en derredor de un disco hipójino, cuyos filamentos llevan anteras pegadas por su cara interna y adheridas con celdillas estrorsas ó laterales. Pistilo compuesto formado de algunos ó de muchos ovarios libres ó agrupados sobre un receptáculo falso ; uniloeulares y monospermos, con un estilo simple á veces la- teral, que se termina por un estigma sencillo y de forma variada : algunas veces hay solamente 5 ovarios uniloeulares polispermcs y mas raramente uno único por haberse soldado algunos. El fruto muy variado consiste ora en una cápsula polisperma y unilocular, que se abre lateral y lonjitudinalmente por una grieta vertical, ora en muchos. aquenios agrupados en cabeza , cuyo vértice se prolonga algunas veces en penacho plumoso mas ó menos largo, otra vez son S á 5 carpidlos polispermos ; en fin rarísima vez es una baya unilo- cular polisperma; las semillas contienen un embrión diminuto alo- jado hacia el vértice de un endospermo córneo y con igual direc- ción que él. Tribu 1*. Clematídeas. Cáliz colorido de prefoliacion valvar; los pétalos suelen faltar alguna vez que otra ó son mas cortos que él ; aquenios monospermos cuyo estilo muy largo es con figura de pe- nacho y persistente, con semillas colgantes: vejetales leñosos, sar- mentosos ó abejucados y con hojas opuestas. — Clematis, L. — Be- juco de tallos delgados muy -largos y muy ramosos, pubescente ó alampiñado con las hojas divididas por á 3, cuyos segmentos aova- 228 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGA.MOS. dos y enteros son largos de 1" 1\2 á2". Flores en panojas polígamas, con cáliz blanquecino, de sépalos cuneiforme-oblon.uos , abiertos, peludos y largos de 4-6"'; carpelos elipsoídeos, alargándose el vér- tice en penacho plumoso-largo, son largos de 3'" y anchos de 2'". C. dioica, L. C. Americana, Mili. C. IJaranensis, Kth., etc.: C. T. V., 26. — Bejuco alampiñado que parece muchísimo al anterior, del cual difiere por tener las hojas pinatisectas ó con las divisiones del peciolo partidas por á tres y pinatisectas, cuyos segmentos, de ordinario 5, son aovados, enteros y lampiños; panojas dioicas, pu- bescentitas, con los sépalos oblongo-pubescentes ; carpelos elipsoí- <3eos ó elíptico-lanceolados. C. caripeiisis , Kth. Tribu 2. Ranüncúleas. Cáliz verde y de prefloracion empizar- rada; pétalos de los cuales uno lleva una escama pegada por su parte interna y hacíala base; aquenio de semilla erguida ; flores so- litarias y terminales, sin involucro ; yerbas de hojas radicales ó al- ternas y envainadoras por la base del peciolo. — Ranunculus, L. — Yerba perenne, cuyo tallo estriado por el vértice y ramoso se eleva á 1' ó 1' 1^2, de hojas tripartidas, con los segmentos cuneiformes, profundamente dentados; cáliz abierto ó recorvado; carpelos redon- deados, lampiños y marjinados, terminados por un pico corvo ó recto formado por el estilo ; pétalos amarillos. R. repens, L. — Variedades : Cáliz recorvado ; pétalos 5-10; pico de los carpelos de- rechito. JR. tropicus. R. prmnorsus y Bow/plandimis, Kth.: C. T. V., 24. — Yerba un poco inclinada, velluda, un poco mas bajita y de hojas redondeaditas, 3-5 lobas, cuyo cáliz se vuelve por fin re- corvado é iguala á los pétalos: carpelos redonditos, marjinados, tu- berculados, con un pico corto y ordinariamente ganchoso; de már- jen aguda. R. parxifionis, L. C. T. Y,, 25. CLASE XLV. — GUTIFERiNEAS. Familia 96. — GUTIFERAS ó CLUSIACEAS. — Arbustos parásitos algunas veces, ó que principian por ser parásitos falsos y se vuelven después terrestres cuando sus larguísimas raices adven- tivas han alcanzado el suelo en que penetran y se vuelven así troncos bastante gruesos y muy largos, otras veces son árboles de altura y tamaño regulares, cuyas hojas siempre simples y enteras, de ordina- rio coriáceas, algo dobles, lustrosas, lampiñas, cortamente peciola- das y articuladas por la base, son opuestas, á veces verticiladas y muy raramente alternas, con ó sin estípulas. Flores tan pronto her- mafroditas como unisexuales, polígamas, axilares y solitarias ó en grupos y racimos, otras veces terminales, las cuales constan de un cáliz con dos sépalos caducos, otras raras veces con 4 y hasta con 6 persistentes, de estivacion imbricada; corola con 4 y hasta con 10 pétalos apenas unguiculados, dispuestos en 2 ó 3 verticilos ; estam- bres indefinidos insertos al rededor de un disco hipójino, raras veces definidos y entonces 4, de anteras adheridas. Pistilo único formado de un ovario simple superior unilocular polispermo, cuyo ápice lleva un estilocorto que suele faltar frecuentemente; estigma cabezudo ó mcOTILEDÓ.N'EOS. — CLASE 'XLY. GUTIFEKÍNEAS. 229 con dos radios é igual número de lóbulos. Fruto tan pronto una cáp- sula mas ó menos globosa, uní ó plurilocular, polisperma, abrién- dose por 4 hasta 12 valvas, cuyos bordes son generalmente preemi- nentes por adentro j pegados con las placentas, muchas, gruesas y axiles, como una drupa mas ó menos gruesa, unilocular, con 3 ó 4 huesos mas ó menos desarrollados; embrión homctropo, ordinaria- mente sin endospermo, recto, con los cotiledones grandes, espesos y frecuentemente soldados entre sí y rectos. Los vejetales que forman esta familia contienen ordinariamente una savia lechosa amarilla ó resinosa. Análisis dicotómica de las tribus. 1. Fruto capsular ó raras veces drupáceo, 2. — Fruto siempre drupáceo, mas ó menos carnudo, 3. 2. Siempre una cápsula; ovario con algunas celdas conteniendo uno ó algunos óvulos. T. I. Clüsieas. A. — Tan pronto una cápsula como una drupa; ovario de dos celdas con 2 óvulos ó unilocular con uno hasta tres huevecillos. T. II. Calofyleas. Caneleas ó Sym- FONiEAS. — G. I. Calophillum Calaba, Jacq.: C. T. V., 440. — G. II. Rhedia laterifolia, L.: C. T. V., 282. — G. III. Ca- bella alba, Murr. — G. lY. Cinnamodendron corticosum , Miers. 3. Ovario de algunas celdas que contienen cada una un solo óvu- lo. T. III. Gap.cinieas. — Mammea Americana, L.:C. T. Y., 817. — Garcinia mangostona. — Ovario con algunas celdas conteniendo cada una muchos óvulos. T. lY. Moronobeas. Moronobea coccinea. Aubl. C. T. Y., 121. A. Clüsia, L. — 1. Flores blancas ó amarillentas, 2. — Flores rosadas mas ó menos pálidas ; árbol muy ramoso y bastante coposo que se eleva como á 25 ó 30' de altura, muchas veces naciendo pará- sito en los árboles mas altos, y desde allí echando raices que con el tiempo se vuelven troncos, con hojas tiesas sub-recortadas, obovales coriáceas, de un primoroso color verde, de cara superior lustrosa, mientras la inferior opaca tiene muchas venitas un poco proeminen- tes y derechitas, lampiñas, largas de 5 á 6" y anchas de 3 á 4", con un peciolo corto, espeso, estriado y largo de 6'", hay 1 ó 2 flores en el vértice de un pedúnculo corto, primorosas y grandes, de cáliz con 6 sépalos, corola con 6 á 8 pétalos largos de como 1' 1|2, obovales ú obcordatos, estigmas 8. de ordinario ó 7-9 ; fruto globoso de 20'" de diámetro. C. rosea, L.: C. T. Y., 441. 2. Flores siempre blancas, 3. — Flores amarillo pálido; árbol de hojas redondeadas ó sub-truncas por el vértice, pecioladas largas de 2" 1|2 á 2" sobre 1" á 1" 1|2 de ancho, de cara superior estriadita, mientras en la superior se ven muchas venitas apenas notables, ó un poco preeminentes; pedúnculos con 2 ó 3 flores cuyo cáliz tiene 8á 16 sépalos, y la corola 4 pétalos largos de 10"'-8'"; como 12 es- tigmas; fruto sub-globoso. C. flava, L. 3. Hojas subsesiles un poco abrazadoras por la base, venosas por sus ambas caras: árbol que se eleva como á 30' de altura con hojas redondeadas ó sub-truncas por el vértice, largas de 3-4" sobre 2-3" 23v0 DIVISIÓN SErTü:ÍDA. fanerógamos. de ancho, con las venas primarias numerosas, rectitas y algo proe- minentes, cortamente pecioladas; pedúnculos 3 á5-floros, cáliz con 6 ó raras veces 4 á 8 sépalos; corola de 4 pétalos largos de como 9'"; estigma 4-5. C. venosa, Jacq. — Hojas pecioladas de cara inferior sola venosa; árbol que se parece mucho al cupey ó clusia rosea, cu- yas hojas redondeadas por el vértice son largas de 3-1" sobre 3-4" de ancho, con las venas primarias numerosas, de las cuales muchas son rectas; peciolo largo de 6'" y espeso; pedúnculo con 1 ü3-flores, con 6 á 9 sépalos y 5 pétalos largos de como 1" ; estigmas 5, fruto colorado ovoideo y largo de 3". C. alba, L. — Tovomita Plumie^^i, Gr. T. haz 6íí^:ícIgs Gr Familia "d^. — MARCGRAVIFAS ó MARCGBAVIACEAS. — Vejetales fruticosos sarmentosos y trepadores ó bejucos leñosos mas ó menos largos, provistos de garras con las cuales se tienen pe- gados á los árboles; de hojas simples siendo las del tallo pegado di- ferentes de las de las ramas, alternas enteras, poco pecioladas. Plores siempre hermafroditas dispuestas en especies de umbelas terminales y entremezcladas con apéndices particulares casi con fi- gura de cornetín y que son quizas brácteas; tales flores constan de un cáliz con 4, O ó 7 sépalos, cortos, empizarrados, persistentes y dispuestos en verticilos de 2 ó de 3 hojuelas ; corola formada de 5 pétalos sentados, otras veces como monopétala, entera y despren- diéndose á manera de una caperuza ; de ordinario muchos estam- bres, con anteras estrorsas, y raras veces solo unos 5. Pistilo único formado de un ovario simple, globoso, plurilocular, polispermo, con los tabiques incom.pletos y las placentas multi-ovuladas, cuj'o ápice está coronado por un estigma sentado con figura de estrella ó rayado. Fruto carnoso y dehiscente, cu^^a dehiscencia se verifica desde la base hasta el vértice, llevándose cada valva irregular de dicha indehiscencia un trofospermo situado por el centro de su cara interior; semillas muchísimas, pequeñitas, cuyo embrión sin endos- permo es recto y cilindrico, con la raicilla corta, pero mas larga que los cotiledones distintos, rectos y pequeños. — Marcgravia itm- hellata. L.: C. T. V., 373. CLASE XLYI. — MALVDÍDEAS. ^ Familia 99. — TILllCFAS. —Plantas herbáceas, matas, frú- tices, arbustos y árboles grandes y corpulentos, con hojas simples, pecioladas, enteras, festoneadas ó dentadas, lampiñas, pubescentes ó velludas, alternas y acompañada la base de su peciolo de dos estí- pulas caducas cuya forma y tamaño varian mucho; flores siempre hermafroditas, solitarias y axilares, ó en grupos racimosos ó apa- nojados y terminales, las cuales se componen de un cáliz con mu- chos sépalos ó segmentos valvares y ordinariamente deciduos, pero las mas veces son 4 ó 5; corola de 4 á 5 pétalos con frecuencia glandulíforos ñor la base, suele faltar alííunas veces; estambres mu- ches hipójinos de ordinario distintos, cuyas anteras biloculares son inclusas, abriéndose por grietas lonjitudinales. Pistilo simple DICOTILEDÓNEOS. CLASíí XLTI. MA.LVOÍDEAS. 231 formado de un ovario único, superior y plurilocular polispermo, de cuyo ápice sale un estilo sencillo ó á veces algunos y que suele faltar algunas raras veces ; estigma simple y entero. El fruto es una haya ó una cápsula plurilocular polisperma, ó muchos aquenios agrupa- dos en cabeza; embrión recto ó corvo alojado en un endospermo carnoso. Tribu l'\ — Grewieas. — Flores con sépalos distintos y con pé- talos que raras veces faltan; anteras ovoideas ó redondeaditas abriéndose por una grieta lonjitudinal ; conectivo no prolongado. G. I. Triumfetta , L. — Flores con pétalos siempre , 2. — Flores apétalas; vejetal fruticoso, ramoso y alto de 2 á 5', aterciopelado y cuyos pelitos están dispuestos á manera de estrella, con hojas re- donditas ó lobadas, desigualmente dentadas, cuyos dientes mas in- feriores se vuelven glándulas obtusas, pecioladas y largas de 2'' á 2" 1|2; flores racimosas cuyos pedicelos igualan al fruto; sépalos peludos y provistos de un apéndice, amarillentos y largos de V" 1|2; estambres 10; estigma bífido, aquenios globosos biloculares, lampi- ños, cuyo ganchito peludo iguala su diámetro, que es de '2'". T. lap- pula, L. : C.T. V., 9(3. 2. Dientes mas inferiores de las hojas semejantes á los demás ú homomorfos, 3. — Dientes mas inferiores de las hojas diferentes de los demás y transformándose en una glándula obtusa, ó heteromor- fos; vejetal fruticuloso, ramoso, de como 3 á 5' de alto, aterciope- lado, con pelitos estrellados, cuyas hojas aovado-redonditas con una punta, desigualmente dentadas y pecioladas, son anchas de 3" á 5"; flores cortamiCnte pediceladas, cuyos pedicelos son mas cortos que los cálices, largos de 3'" é iguales á los pétalos oblongos; sépa- los pubescentes y con un apéndice ó piquito; estambres 15; estigma 4-fido ; ovario 4-locular. T. macrrrpliylla, Yahl. 3. Sépalos nunca jamás con ápice glanduloso, 4. — Sépalos algu- nas veces con el ápice glanduloso; aquenios ovoídeo-globosos 3-4- loculares, lampiños y con los ganchitos peludos é igualando á su diámetro que es de Y" 1|2 y largos de 2'" ; planta fruticulosa ater- ciopelado-peluda, cuyo pelo es estrellado, con hojas redondeaditas ó lobadas, desigualmente dentadas, cuyos dientes superiores son lan- ceolados; flores racimosas, cuyos pedicelos igualan al fruto, de cáliz largo de 2'" 1[2, con sépalos peludos provistos de un pico, igualando los pétalos oblongos; estambres 10; estigma apenas dentado. T. al~ thecAdes, Lam. 4. Aquenios ovoídeo-globosos 2 ó 3-loculares y lampiños, así como los ganchitos, 5. — Aquenios 3 ó 5-loculares, 7. 5. Siempre biloculares, ordinariamente 4-spermos, 6. — Bi ó tri- loculares; vejetal fruticuloso con pelo esparcido y ordinariamente simple, de hojas aovadas enteras ó cortamente 8-lobas, desigual- mente aserradas, cuyos dientes superiores son oblongo-lanceolados, peciolados y largos de 2-3" sobre 1" 1[4 á 2'' de ancho; flores fasci- culadas distantes, cuyos pedicelos igualan las flores, de cáliz largo de 2'" á 3'" é igualando los pétalos oblongos, con sépalos peludos y picudos ; estambres 20, rara ve? 10 ; estigma diminuto y sub-entero. T. grossulari folia, Rich. 232 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 6. Frútice muy ramoso j que se eleva como á 4 ó 6' de altura, pubescente, con pelo estrellado, raramente aterciopelado, algunas Yeces con la cara superior de las hojas alampiñada, de hojas redon- deaditas, 3-5-lobas ó sub-enteras, desigualmente dentadas y cuyos dientes superiores son lanceolados; flores en racimos interrumpidos, cuyos pedicelos igualan el fruto, cáliz de 3'" de largo é igualando los pétalos espatulados y cuyos sépalos son peludos y picudos; es- tambres 15; estigma apenas dentado. T. semitriloia, L. : C. T.V., 97. 7. 3 á 5-loculares peludo-tomentosos, con los ganchitos lampiños y la mitad de su diámetro que es de V" ] j2; frútice de 3 á 4' de al- tura, cuyos ramos escabrosos y con cerdas pequeñas y estrelladas llevan hojas red ondeaditas, desigualmente dentadas, ordinariamente angulosas, con una punta, de cara superior alampiñada, mientras la inferiores pubescente, las superiores son oblongas; flores en haces distantes, cuyos pedicelos igualan el fruto; cáliz largo como de 3'", con sépalos peludos y picudos; pétalos espatulados; estambres 15; estigma 8-5-ñdo. T. rJwmboidea, Jacq. — T. rhomioidea, Sw. — Siempre 5-loculares, globosos y lampiños, con los ganchitos lampi- ños ; frútice ó mata fruticulosa, alto de 3 á 4' y cuyos ramos vellu- dos con pelo flexuoso llevan hojas anchamente aovadas, con una punta, y desigualmente festoneadas, cubiertas de pelo simple y es- parcido ó alampiñadas y cuyas superiores son lanceoladas; flores en hacecillos distantes, cuyos pedicelos son mucho mas largos que los frutos, de cáliz con sépalos lampiños picudos, lanceolado-lineares largos de 8'" y mas que los pétalos obovales, que tienen solo 6'"; estambres 10; estigma 5-fido. T. grandiflora, Vahl. G. II. CoRCHOEUs, L. — 1. Estambres hipójinos; cúpula ninguna; plantas herbáceas anuales O fruticulosas, 2. — Estambres insertos en el vértice de un ginóforo corto cuya base está ceñida por una cú- pula ondeada; frútice bastante ramoso y tomentoso alto de 3 á 5', con hojas aovado-lanceoladas ú oblongas y obtusas, festoneadas, largas de 1" á 2", pecioladas, y de cara inferior lijeramente peluda; 2-8 pedicelos dispuestos como en umbela, casi tan largos como los pedúnculos; flores de cáliz con sépalos tomentosos, largos de como 3''' é iguales á los pétalos obo val-oblongos; estambres indefinidos; cápsula furfuráceo-lanuda, oblonga, obtusa, corva, 4-locular, larga de 6'" y ancha de 2 á 3'". C. Mrsiitus, L. 2. Vejetales mas ó menos lampiños, 3. — Vejetales munca lampi- ños, pero siempre mas ó menos peludos, 5. 3. Enteramente lampiños, 4. — Lampiños, pero cuyo tallo e^tá adornado de una línea pubescente y la cápsula pubescentita, 3-locu- lar, linear, rectita y con tres dientes bífidos en el ápice, hojas ao- vadas, aguzadas, aserradas, cuyos dos dientes inferiores llevan una punta por el dorso y se terminan por una cerda corta ; flores fasci- culadas. C. cBStiians, L. 4. Enteramente lampiño, de tallo herbáceo ramoso que se eleva á 3 ó 6' de altura, con hojas aovado-oblongas ó aovadas, largas de 5" ó mas pequeñas, pecioladas, con una punta, aserradas y cuyos dos dientes mas inferiores llevan una punta por el dorso y se terminan por una cerda larga; flores sub-solitarias, de corola con pétalos es- DICOTILEDÓNEOS. CLASE XL\I. MALVOÍDEAS. 2.'i3 patulados largos de 3 á 4'" é iguales á los sépalos ; estambres indeíi- nidos; cápsula lampiña, linear-rectita, sub-cilíndrico-torulosa, larga de 2" sobre 2'" de diámetro, terminada por 5 púas cortitas, 5-locu- lar j con falsos tabiques transversos y completos. C. oUtorius, L, : — Enteramente lampiño seria, á no ser pubescentita la cápsula á lo largo de sus suturas, y á no tener de ordinario el tallo una sola línea muj finamente pubescente; frútice ramosísimo, alto de 2 á 4', con los ramos derechos y dispuestos como á manera de escoba, de hojas aovadas, aguzadas, oblongo-lanceoladas y largas de 1" 1{2 á 3", pero ordinariamente mucho mas pequeñas, pecioladas, aserradas y con los dientes iguales y sin cerdas; flores fasciculadas por á 4 ó solitarias, con los pétalos obóvales ó espatulados, largos como de 2'" y sin embargo ordinariamente algo mas cortos que los sépalos estrechos; estambres muchos ó 4; cápsula linear, recta, sub-comprimida, largado 1[2" á 2" 1|2 sobre V" de ancho, bilocu- lar y con dos dientes bífidos en el ápice. C. siliqíiostis, L. 5. Cápsula lampiña oblongo-linear, larga de 8"' sobre 2'" de an- cho, con 6 ángulos, de los cuales dos ó tres son alados, rectos, con 3 púas enteras ó bífidas por el ápice, 3-locular y con falsos tabiques transversos é incompletos; hojas aovadas con una punta, alampiña- das, aserradas, con los dientes iguales, flores sub-fasciculadas ordi- nariamente, 2 ó 1. C. acutanguhis, L. — Cápsula peluda, linear. corva por la base, larga de 1" á 1" 1{4 sobre V" 1|2 de ancho, sub- torulosa, aguzada con el vértice, provisto de una punta entera, 2- locular; yerba fruticulosa con pelo esparcido, y de hojas aovado- lanceoladas ú oblongas, alampiñadas, festoneado-dentadas, con los dientes iguales y largas de 1' á 2"; flores fasciculadas por grupos de 3 ó solitarias, cuyos pétalos largos de como 2-3'", sonespatulados: es- tambres indefinidos. C. liirsutuSyl^. C. tortipes. St. Hil. G. III, MuNTiNGiA calabura, L. : C. T. V., 300. Tribu 2. — Sloáneas. — Sépalos reunidos por la base ó libres en el verticilo interior, anteras oblongas ó lineares, con el conectivo prolongándose mas allá de las celdas. — G. I. Sloánea, L. — Flores solitarias y cabizbajas, de cáliz aterciopelado en 2 series, cuya este- rior 4-partida tiene los segmentos aovados y con una punta, mien- tras la interior es 4-fila, con los sépalos largos de 4'" á 5'" y la mitad tan achos, algunas veces mas cortos, trífidos ó sub-enteros; árbol que se eleva desde 60' hasta 100' de altura, muy ramoso y cuyo tronco alcanza un diámetro de 4', con hojas oblongo- aguzadas, sub-enteras y lampiñas; estípulas pequeñas y caducas; estambres pubescentes mas cortos que la serie esterior calizinal, larga de 6'". cuyos filamentos muy cortos llevan anteras oblongo-lineares, largas de 2'", sub-acorazonadas por la base y aguzándose por el vértice. con el dorso adornardo de un apéndice corto, abriéndose por poros situados por debajo del ápice; cápsula 4-locular globosa, erizada, con cerdas rectas, de 3-4" de diámetro y cuyas semillas están envueltas en un arillo encarnado. S. Jamaicensis, Hook. — Flores en racimos pubescentes mucho mas cortoíj que las hojas del cáliz formado de una sola serie 5-6-partida, cuyos segmentos oblongo-lanceolados son aguzados; árbol muy alto, pero algo menos que el anterior, mas tan 234 DIVISIÓN segu>;da. fanerógamos. coriJiilento, con hojas ovales redondeadas por el vértice, sub-enteras ó apenas dentaditas, alampiñadas, ordinariamente largas de 8 á 12", con el peciolo pubescente; estípulas lineares, elongadas y largas de 6'". Estambres pubescentes, largos de 4"' y saliendo fuera del cáliz, cuyos ñlamentos lineares son tan largos co^o las anteras subulado- lineares, abriéndose por un poro oval que por fin se vuelve una grieta lateral, con un apéndice filiforme del largo de la celda, estilo eserto 5-4-fido, con los brazos lineares terminados por un estiíima diminu- to; cápsula 4-locular sub-globosa, S. Massoni, Sw. C. T. V., 98. G. II. Apeiba tibourbou, Aubl. : C. T. V., 299. Familia 100. — MALVACBAS. — Plantas herbáceas anuales, bisanuales y vivaces, matas, frútices, arbustos y hasta árboles, mas ó menos grandes, con hojas simples enteras, dentadas, angulosas, mas ó menos lobadas y á veces dijitadas, palminervias y siempre al- ternas, ordinariamente con pelo dispuesto á manera de estrella, pecioladas y acompañadas de 2 estípulas situadas por la base del peciolo, libres, caducas, de forma y tamaño muy variados. Flores primorosas siempre hermafroditas, solitarias y axilares, en espigas ó panojas terminales, cuyo pedicelo sale siempre de la axila de una hojuela floral y se componen de un cáliz monosépalo campanudo, con divisiones mas ó menos profundas, ordinariamente de estivacion valvar, que están algunas veces reemplazadas por igual número de dientes; con frecuencia su base está ceñida ó envuelta por un calí- culo ó involucro calizinal monófilo, cuyas divisiones mas ó menos estrechas varían entre 3 y 15 y cuya forma y tamaño varían mucho: raras veces está entero; corola de 5 pétalos distintos y unguiculados, cuya base ó cuyas uñas están reunidas y soldadas entre sí por medio del andróforo, y entonces se ha vuelto corola seudo-monopétala que se desprende y se cae así entera, llevando consigo el andróforo que contiene en su interior el estilo; es hipójina, sus pétalos son iguales, de forma y tamaño muy variados y de prefloracion torcida; hay muchísimos estambres monodelfos, rarísimas veces 10, cuyas ante- ras sostenidas por filamentos ó andróforos secundarios que se sepa- ran del andróforo principal, dispuesto á manera de columna en el centro de las flores, son ordinariamente reniformes y uniloculares, con el polen globoso y pelierizado ; pistilo simple formado de un ovario superior compuesto y cuyas celdas separadas constituyen otros tantos ovarios agrupados circularmente al rededor de un eje central, cuyo vértice lleva un estilo filiforme, largo, sencillo, pero que no tarda en dividirse hacia su 1t3 superior en 5 á 20 divi- siones, cada cual con su estigma correspondiente cabezudo ó con figura de un hisopo mas ó menos velludo ó aterciopelado y que salen fuera por la abertura que se halla en el ápice del andróforo, donde diverjen; cuando el ovario es único, lo que sucede bastantes veces, ps 5-locular y polispermo, mientras que en el caso precedente cada ovario parcial es unilocular, mono ó 2-spermo. El fruto consiste en 5 hasta 20 carpelos ó cajitas monospermas, de forma y tamaño muy variados, uniloculares y agrupados circularmente como ^^a lo tene- mos señalado para los ovarios; algunas veces con 2 y mas semillas; »>tras veces es una cápsula única mas ó menos gruesa, ordinaria- DICOTILEDÓJs'EOS. CLASE XLVI. — MALVOÍDEAS. 235 mente 5-locular, abriéndose por 3 ó 5 valvas; semillas arriñonaclas, globosas y á veces triangulares, lisas ó ásperas, desnudas ó peludas, con un embrión corvo sin endospermo y cuyos cotiledones foliáceos están doblados sobre la raicilla. Análisis dicotómica de las trilus. 1. Flores siempre con un calículo, 2. — Flores de cáliz sencillo y nunca acompañado de calículo ninguno; carpelos verticilados de- hiscentes que se desprenden del eje en tantas de* cajitas ó en ten- tas valvas septíferas, monospermas, y cuyo número corresponde al de las estigmas ; columna ó andróforo anteríí'ero solamente por el vértice. T. I. Sídeas. A. 2. Fruto nunca capsular, 3. — Fruto siempre capsular, con tan- tas celdas cuantos estigmas hay, ordinariamente loculícido, abrién- dose por 3-5-10 valvas septíferas, alguna vez que otraindebiseente, andróforo 5-dentado por el vértice. T. IV. Hibisceas. D. 3. Tantos carpelos cuantos estigmas \\ixy, verticilados, distintos y ordinariamente acabando por desprenderse del eje central en otras tantas cajitas monospermas; andróforo anterífero solamente por el vértice. T. lí. Málveas. B. — Carpelos en número la mitad menor que el de los estigmas, uni-ovulados y por fin separándose los unos de los otros y desprendiéndose del eje, las mas veces armados; an- dróforo de ordinario 5-dentado por el vértice. T. III. Uréneas. O. A.G. I. Sida, L. — 1. Cáliz siempre 5-fido, de tubo mas ó menos cilindrico, hojas siempre enteras, 2. — Cáliz siempre 5-fido ó 5- dentado, con el tubo de ordinario anguloso; carpidlos con dos picos ó dos puntas en el ápice por doi-de se abren, 3. 2. Tubo del cáliz sub-cilíndrico; carpidlos obtusitos é indebiscen- tes; flores en corimbos terminales ; vejetal fruticuloso, de tallo rec- to, con forma de varita y ramoso por el vértice, pelierizado ó alam- piñado, con pelo simple, cujas hojas lineares, elongadas, bien enteras, son largas de 2-3" sobre 2-3'" de ancho, y acompañadas de estípulas setáceas é iguales al peciolo; corimbos con pocas flores, cuyo cáliz, largo de 2 á 3'", con figura de cúpula y por fin conni- vente y encerrando los 5 á 8 carpidlos lampiños, tiene sus lóbulos deltoídeosy mas cortos que los pétalos blancos. S, linifolía, Juss. — Tubo del cáliz cilindrico; carpidlos separándose de su pico bífido y dehiscente á favor de im anillo transverso y calloso ; semillas pu- bescentes; panojas flojas y terminales. Mata fruticulosa cuyo tallo se eleva derecho á 3 ó 4' de altura, pubescente y con pelo estrellado y lleva hojas acorazonadas, aguzadas, de cara superior lampiña, mientras la inferior es tomentosa, cortamente pecioladas, algo agu- zadas por la base y de vértice obtusito, 2 ó 3 veces mas anchas que largas; panojas abiertas, con brazos dictantes, paucííloras y con pe- dicelos racimosos, filiformes y cabizbajos, cáliz largo de F", con los lóbulos aovados y puntiagudos, 2 veces mas cortos que los pétalos amarillos; 5 carpidlos, cuyas' semillas angulosas superiormente son pubescentes en los ángulos. ;S'. diveroens, Benth. S. peHvlocifGlia, Macf. i . . . •23o DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 3. Hojas aguzadas ó redondeadas por la base, 4. — Hojas acora- zonadas por la base, 7. 4. Flores cortamente pediceladas ó subsesiles, pedicelos no arti- culados por encima del medio, 5. — Flores pediceladas, cuyos pe- dicelos son articulados por encima del medio, 6. 5. Mata fruticulosa cuyo tallo ramoso se eleva á 3 ó 5' de altura, con hojas elíptico- lanceoladas, aserradas por encima de la base, romboídeo-lanceoladas, aguzadas ú obtusitas, de cara inferior lam- piña, estrellado-pubescente ó estrigosa sobre las nervaduras, pecio- ladas; estípulas lineares ó setáceas tan largas como los peciolos j los pedicelos ; flores axilares de ordinario faseiculadas ó solitarias, cortamente pediceladas, cuyo cáliz 5-fido es mas corto que los péta- los amarillos; carpidlos 8 á 10, reticulados, con dos picos ó dos pun- tas, lampiños ó pubescentes por el dorso y sobre el pico, recto ó por fin corvo y largo de 1|2'" á 1'". >S'. carpinífolia, L. JS. stijmlata, CsLY.S. acuta, Burm. 6. Frútice ó mata fruticulosa de tallo ramoso que se eleva á 2 ó 3' de altura, pubescente óalampiñado y con hojas romboídeo-lanceo- ladas ó lanceoladas, aserradas por encima de la base, óvalo-lanceo- ladas ó elíptico-lanceoladas, cara inferior pálida y pubescente; flo- res axilares y solitarias, de pedicelos elongados, casi tan largos como las hojas, cuyo cáliz 5-fido es mas corto que los pétales amarillo- pálidos, con una mancha roja por la base ; carpidios 8 á 10, raras veces 5, con dos picos, dos dientes ó un pico nada mas, lampiños y peludos en el pico. S. rJiomMfolia, L. JS. retusa, S. alia, Cav. 7. Tubo calizinal 5-10-anguloso , 8. — Tubo calizinal cilindri- co, 11. 8. Lóbulos calizinales subulados y tubo con 5 ángulos, 9. — Tubo 5-10-anguloso, lóbulos calizinales grandes y deltoídeos, 10. 9. Planta herbácea, peluda ó alampiñada, de tallos inclinados y difusos, con pelo ordinariamente simple, cuyas hojas acorazonado- triangulares ó acorazonado-aovadas, agudas y obtusas por el vérti- ce, son bien lampiñas y con el peciolo casi tan largo como el limbo; pedicelos filiformes de ordinario, solitarios, articulados, tan largos ó mas que el peciolo: cáliz largo de 2'", 5-fido, mas corto que los pétalos amarillos ; carpidios 5, con dos picos peludos y tan largos como ellos. S. supina, THer. S. 2^^''^osa, Cav. S. procumiens, Sw. S. d.omieyana, De. 10. Vejetal fruticuloso de 2 á 4' de alto, muy ramoso, aterciope- lado, tomentoso, con el pelo estrellado y cuyas hojas sub-acorazona- das ó cordiformes, con una punta ú obtusas y festoneado-aserradas, largamente pecioladas; flores de ordinario axilares, cuyos pedicelos solitarios son casi tan largos como el peciolo, de ordinario con un ramo floral accesorio ó con todas las flores agrupadas en la axila, cáliz tomentoso 5-fido, de tubo con 5 ángulos y con los lóbulos por fin conniventes; pétalos esertos de color amarillo teñido de bruno; carpidios 10-12-truncos y peludos por el vértice ó bi-aristados ó bi- dentados. S. cordifolia, L. S. althúñfoUa, Sw. S. multijioo'a, Micans. S. rotwiidifolia herhacea, y Cav. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLVI. — MALVOÍDEAS. 537 11. Mata fruticulosa alampiñada, con pelo diminuto y esstrellado, de tallo delgado, ramoso y que se eleva hasta 4 y 5', de hojas aco- razonadas, con una punta, festoneado-aserradas, lampiñas, grandes y largas de 3-4" sobre 3" de ancho, cuyo peciolo iguala casi el lim- bo; flores apanojadas, con los brazos primarios estendidos y racimo- sos, en parte axilares, mientras los secundarios son corimbosos, con 3 á 7 flores de pedúnculo articulado y cuyo cáliz, largo de 2'", 5-fido y pubescentito, tiene lóbulos cortamente subulados y es la mitad mas corto que los pétalos amarillos y por fin abierto ; carpidlos 5-6 cor- tamente bi-dentados y pubescentes. S. pfjramidata, Cav. G. II. ABUTir,ON, T. — 1. Carpidlos 5 ó mas, 2. — Carpidlos siempre en número mayor de 5 y de 12 á 20, membranáceos, hinchados, re- dondeados por el vértice, muy tardíos para separarse y bivalvares por la base, 4-5 spermos ó monospermos por causa de aborto. Mata fruticulosa, ramosa, aterciopelada y de hojas acorazonado-redondea- ditas,con una punta, festoneadas, pecioladas las inferiores, y sésiles las superiores; pedicelos axilares solitarios articulados por debajo del ápice, casi iguales á las hojas; cáliz largo de 2'", profunda- mente 5-fido y con los lóbulos aovados y puntiagudos, mas cortos que los pétalos blancos y largos de 3-4'" ; carpidlos pulidos, apenas pubescentitos y largos de 4 á 6"'. A. crisptcm, G. Don. JSida cris- pum, L. Bastardía crispa, St.-Hil. 2. Carpidlos 5 á 10, 12 ó muchos , 3. — Carpidlos siempre 5, bi- articulados y estrechados por un anillo calloso transversal ó tabi- que incompleto , no hinchados, dehiscentes superiormente, cuya parte superior contiene dos semillas y la inferior una ; frútice ó mata fruticulosa de 4' á 6' y hasta 10' de altura, bastante ramoso, pubescente ó alampiüado y de hojas cordiformes con una punta ó aguzadas, bien enteras ó apenas festoneadas, ordinariamente de cara superior alampiñada, mientras la inferior blanca está provista de pelito estrellado; flores apanojadas, con los brazos apartados, abiertos, terminadas las panojas por corimbos paucífloros ó uniflo- ros, cuyos pedicelos elongados son articulados por debajo del ápice, cáliz pequeño largo de V" á 2'", diverjente, 5-fldo y con lóbulos del- toídeos 2 á 3 veces mas cortos que los pétalos amarillos ; carpidlos diverjentes, ovoideos, estrechados por debajo del medio, puntiagu- dos ó mucronados y 3 á 4 veces mas largos que el cáliz; semillas pu- bescentes. A. periplocifolmm , G. Don. Sida periiúocifolmm, L. 8. excelsior, Cav. S. liernandioides , L'Her. 3. Carpidlos 5 ó muchos, 4. — Carpidlos de 5 á 10 ó doce, 5. 4. Coriáceos, comprimidos, con una punta ó un pico ú obtusos, diverjentes por el ápice, dehiscentes á lo largo de una sutura ven- tral; y por fin según una línea dorsal; arbusto ó mata fruticulosa, que se eleva desde 2' hasta 10' de altura, aterciopelado-tomentoso. ordinariamente con el tallo peludo, de hojas acorazonado-redondea- das, con una punta, desigualmenie dentadas, de cara inferior blanca y aterciopelada ; pedicelos axilares sub-solitarios, articulados por debajo del ápice, casi iguales al peciolo; cáliz largo de 4'" á 5'", 5- fido, con los lóljulos aovados. puntiagudos y el tubo no plegado, dos veces mas cortos que los pétalos amarillo-anaranjados, con una 238 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. mancha mas oscura por la base ; carpidlos de 12 á 30, mucronados, iguales al cáliz acresciente ó un poco mas largos que él, con 3 á 9 t;emillas verrugosas y lampiñas. A. Indiciim-Asiaticiim-hirsutiimy G.Don. A. graveolens, W. Arn. Sida Indica-Americana- Asiática, L. S. po2mínifolia é Mrta, Lam. S. imlescens, Cav. S, ahiti- loides, Macf. 5. De 5 á 10, ni hinchados ni estrechados, pero sí con 2 picos, 2 ó 3 semillas j dehiscentes entre el pico v la línea dorsal. Frútice ó mata fruticulosa, derecha, ramosa, escabra ó pubescente con pelito muy dim^inuto, de hojas aeorazonado-redondeadas, con una puntita, festoneadas y un poco trílobas; pedicelos articulados hacia el vérti- ce, dispuestos en corimbos ó en umbelas, sostenidos por pedúnculos axilares ó racimosos á lo largo del tallo ó de las ramas herbáceas ; cáliz peludo 5-fido, por fin globoso y ancho de A"\ dos veces mas corto que los pétalos amarillos y con los lóbulos subulados ; carpidlos 5, aovados, pelierizados, casi iguales con el cáliz aplicado á ellos ó cortamente esertos, dos veces mas largos que su pico aristado, con semillas muricadas y lampiñas. A. uondellatuon, Sw. — De 5 á 12, membranáceos, sub-hinchados, con dos picos y bivalvares por la base; hojas de ordinario 3-5-fidas; arbusto lampiño con hojas 3- fidas, aserradas por encima de la base acorazonada con los lóbulos puntiagudos; pedicelos axilares solitarios no articulados, casi igua- lando las hojas; cáliz profundamente 5-fido, largo de 8' ', de lóbulos aovado-lanceolados, aguzados, dos veces mas largos que el tubo }'• dos veces mas cortos que los pétalos anaranjado-amarillos estriados de colorado y un poco mas cortos que los estilos; carpidlos 8. A, striatum. B. G. I. Malvastrüm, As.Gr. Como 15 carpidlos sin arista, lampi- ños y pubescentes por el vértice inclinado, liso sobre el pico ; flores espigadas; mata fruticulosa como de 2 á 3', derecha j ramosa ó frú- tice que se eleva de 5 á 6' de altura, pubescente ó blanquecino, con hojas deltoídeas ó aovadas con una punta, festoneado-aterradas por encima de la base, de cara inferior ordinariamente de color verde pálido ó lijeramente blanquecina y cu jo pelito es suave; espigas de las flores oblon2:as, cuvas alsrunas reducidas son axilares; calículos con 3 divisiones lanceoladas Igualando el cáliz, cuyos lobos aovados ó aovado-lanceolados son puntiagudos y tan largos como el tubo ó un poco mas; pétalos anaranjados ob-cordados y cortamente esertos. M. sjiicatum, Gr. Malta spicata, L. M. Americana, A. Rich. M. polystacliia, Cav. — Carpidlos 10 ó mas, tricu¿pldados, con la parte superior pelierizada á la vez que estriada sobre el pico; flores axilares fasciculadas ó i-:olitarias ; mata fruticulosa alta de 1 á 2', sub-estrigosa y cuyo pelo está aplicado al tallo, con hojas ao vado- lanceoladas ó romboídeo-lanceoladas, aserradas; flores superiores algunas veces aproximadas y algo espigadas, cortamente peduncu- ladas con el calículo, cuyos tres segmentos lineares son por fin mas cortos que el cáliz ú obsoletos. M. tricuspidaUím , As. Gr. — Malva Ameoncana, L. M. Coromandelina, Sw. M. Dominigensis, Spr. C, T. V., 446. G. II. Anoda liastoAa, Cav.: C. T. V., 451. DICOTILEDÓNEOS.— CLASE XLYI. — MALV0ÍDEA3. 239 C. G.I. Urena, L. — Hojas sea trífidas por arriba del medio ó con lóljiüos apenas pronunciados y enteros, de cara inferior glauco-pu- bescente, y con lóbulos aovados ú oblongos y aserraditos, de ordina- rio con una ó á veces con tres glándulas ovales hendidas y situadas en la base de las nervaduras ; mata fruticulosa ó frútice, que se ele- va á 2-3 y 5' de altura, bastante ramoso y cuyos ramos largos son en varita y moradusco-lampiños; flores axilares sub-solitarias bas- tante grandes y color de rosa subido, cuyos pétalos, de 6 á 8'", son tres veces mas largos que el cáliz. U. lohata, L. — Variedades : seg- mentos del involucro escediendo mas ó menos el cáliz; carpidlos pubescentes. U. Americana, L. U. o^eticidata, Macf. ¿7. ximi- nea , Cav. U. Swartzii , A. Rich. U. microcarpa, De. Divisio- nes del calículo bien iguales con el cáliz ; carpidios tomentosos. U. Sicartzii, De. U. sinnata, S\v. U. Americana y U. riheria, Sm.: C. T. V., 642. — Hojas cuyos 3 ó 5 lóbulos principan mas abajo que el medio, son romboideos, estrechaditos por la base, des- igualmente aserrados y con 3- glándulas hendidas y elípticas; cara inferior giauco-pubescente. Mata fruticulosa ramosa y q.ie se eleva á 2' ó 3' de altura y se parece mucho á la anterior; segmentos del involucro igualando el cáliz; flores bastante grandes, de color rosa- do, cuyos pétalos son largos de 6"' y 3 veces mas que el cáliz ; c?ir- pidios pelierizados. U. simtata, L. V. paradoxa, Kih* U. Swar- tzü, Macf.: C. T. V., 642. G. II.Malachea,L. 1. Hojas muy raras veces lobadas, pero casi siempre enteras, 2. — Hojas de ordinario trífidas hasta el medio, cuyo lóbulo mediano es oblongo y puntiagudo ó aovado, así como las hojas superiores; mata fruticosa, muy ramosa, pelierizada y cuyo pelo largo y tieso es muy punzante, que se eleva á 5' ó 6' de altura, cuyos capitules floi'ales, ordinariamente pedunculados, están aveces acompañados de uno sésil y accesorio, con cáliz profunda- mente 5-fido, dos veces mas cortos que los pétalos de color purpú- reo blanquecino y cuyos lóbulos son lanceolados; carpidios lampiños la mitad mas cortos que el cáliz. M. radiata, L. 2. Hojas redondeaditas, 3. — Hojas aovadas obtusitas, aserrado- dentadas, enteras; planta fruticulosa, alta de 3 á 5', ramosa, cuyos capítulos florales son sentados; cáliz profundamente 5-fido, 2 veces mas corto que los pétalos purpuráceos y cuyos lóbulos son lanceola- dos ó aovado-lanceolados; carpidios velludos muy convexos por el dorso y mas cortos que el cáliz. M. ureas, Poil. M. ciliaía, Poir. 3. Algunas veces lobadas; mata ordinariamente pelierizada, alta de 1' 1[2 á 3', ramosa, cm-os capítulos florales son pedunculados; cáliz mas ó menos profundamente o-fido, con lóbulos aovaclo-lan- ceolados, dos veces mas corto que los pétalos amarillos y casi igual á los carpidios lampiños y conniventes por encima de ellos. M. -pal- mataM^^'^-M.trilohata, Desf. C.T.V. 652. Enteras y muy raras veces lobadas ; flores en capitules pedunculados ó á veces ¡subsesiles, con el cáliz 5-fido y por fin 5-partido, 2 á 3 veces mas corto que los pé- talos blancos ó amarillos, y con lóbulos subulados; carpidios alam- piñados, la mitad mas cortos que el cáliz, de púas lineares y ergui- das. M. capitata, L.: C. T. Y!, 645. 240 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS^. G. III. Pavonia, Cav. 1. Involucro con 5-15 segmentos, 2. — Calí- cülo con 10 á 12 hojitas distantes las unas de las otras, filiformes v cuyo vértice se vuelve de repente un limbo pequeño; carpidlos de"- hiscentes según la línea dorsal ; flores agrupadas, cuyos capítulos axilares son involucrados; hojas con puntitos. Frútice tomentoso, con hojas acorazonado-redondeaditas, irregularmente festoneado- lanceoladas, de cara inferior blancuzca; involucro de los capítulos pedunculados con hojuelas redondeaditas ; segmentos del calículo casi igualando el cáliz, y terminados en un limbo diminuto oblongo- lanceolado y sub-peltado; carpidlos lampiños obovales, corvos por el ápice, convexos y estriados sobre el dorso y sin pico. P. dracteo- sa, Benth. Malachra trinervis. Prl. 2. Involucro 5-15-fido, carpidlos dehiscentes según la línea ven- tral ó por fin según la dorsal ; hojas ásperas con puntos transparen- tes ; flores fasciculadas cuyos hacecillos son involucrados ; mata fruticulosa de 3 á 5' de alto y bastante ramosa cuyas hojas oblongas son aserradas ; hacecillos florales terminales ó axilares, con los pe- dúnculos distantes, cuyos inferiores son mas largos que los superio- res, de pedicelos casi tan largos como el involucro profundamente 5-8-fido, con los lóbulos lanceolados y aguzados, á veces mas largos que el cáliz; flores blancas; carpidlos lampiños, convexos por el dorso, 3 aristados, cuya arista terminal está distante de las otras. P. typlialeay Cav. Urena tyijhalea, L. — Calículo con 5 á 15 ho- juelas, carpidlos indehiscentes ; flores solitarias, racimosas ó co- rimbosas; frútice muy ramoso y de ramos largos, delgados y en varita que se eleva desde 3 hasta 9' de altura, lampiños el tallo y ramos, mientras las hojas acorazonadas son provistas de pelo estre- llado y esparcido por su superficie ; pedúnculos axilares con una sola flor amarilla y bastante grande; la^ hojuelas del calículo dis- tintas y en número de 6-8, son oblongo-lineares é igualan el cáliz 3 veces mas corto que los pétalos largos de 12'", y sin embargo mas cortos que la columna anterífera ; carpidlos lampiños con tres espi- nas tiesas, tan largas como ellos, diverjentes, una infraterminal y las otras dos situadas en el medio de la márjen. P. spinifex, Cav. HiUscus spinifex, L. Paristata, Cay. C. T. V., 643. G. IV. Malvariscus ardor eus^ Cav. M. mollis, De. BiHscus maUariscus , L. D.Hibisceas. G. i. Abelmoschus, Med. — Mata fruticulosa muy ramosa, pelierizada, cuyos ramos largos y estendidos llevan hojas alabardadas é irregularmentc dentadas, frecuentemente con lóbulos accesorios por la base; flores grandes solitarias amarillas, con la uña de los pétalos de color carmesí , con pedicelos axilares y casi igualando el peciolo; calículo con 6-10 hojuelas lineares sub-per- sistentes, tres veces mas cortas que el cáliz, cápsula oblongo-lanceo- lada, peluda, cuyas semillas lampiñas y estriadas huelen á almizcle. A. moscliatiis, Mch.: C.T. V., 298. — "Planta herbácea anual cuyo tallo derecho, mas ó menos ramoso, se eleva desde 3 hasta 5' de altura, peluda y con hojas 5-lobas irregularmente aserradas, undu- losas, acorazonadas, velludas cuando tiernas y por fin volviéndose lampiñas ó á lo menos alampiñadas cuando adultas ; flores axilares. DICOTILEDÓNEOS. — CLAgEXLVl — MALVOÍDEAS. 241 solitarias, graneles, amarillas, con las uiias coloradas, cuyos pedice- los son mas cortos que el peciolo; calículo con 9 á 12 lacinias cadu- cas y cuj'a base sola persiste, tres veces mas cortas que el cáliz 5-dentado ; pétalos largos de 1" 1{2 á 2"; cápsula oblongo-lanceo- iada, alampiñada, con 10 surcos y cerdas, cuyas semillas, á veces peluditas, son sub-estriadas v sin olor particular. A. escuJeiitus, W. A.: C. T. V., 639. G. II. HiBiscüS, L. 1. Semillas siempre lampiñas, 2. — Semillas lampiñas pubescentes ó algodonosas ; hojuelas del involúcelo sim- ples y distintas ; cáliz aplicado sobre la cápsula, 3. 2. Hojuelas del calículo distintas, ensanchadas por el vértice: cáliz 5-fido y ventrudo ; frútice pubescentito con pelito denso, cuyas hojas acorazonadas y festoneadas son obtusitas; pedicelos axilares, articulados, casi tan largos como las hojas ; divisiones del involú- celo 7-10 cilindricas por la base, aovadas obtusitas, sin glándulas y cuyo vértice se ha vuelto limbo reniforme, dos veces mas cortas que el cáliz dos veces mas corto que la corola, cuyos pétalos rosados y abiertos tienen 12"' de largo; cápsula ovoídeo-globosa, peluda, contenida en el cáliz acreciente, con semillas algo muricaditas. H. sororius, L. — Hojitas del involúcelo distintas, de ordinario dilata- das en limbo bifurcado; cáliz 5-fido aplicado sobre la cápsula, cu- yos segmentos llevan una glándula grande y situada sobre la parte esterior de la costilla ; mata fruticosa ramosísima, como aguijonosa y áspera, cuyos ramos largos y en varita llevan hojas 3-5-lobas ó alabardadas, desigualmente aserradas, cuyos pedúnculos son mu- cronados; pedicelos axilares, articulados, mas cortos que el peciolo ó igualándole; segmentos del involucro 10-12, muy ásperos, iguales ó mas largos que el cáliz pelierizado 4 á 6 veces mas corto que la corola, muy grande y color rosado con los lóbulos aovados, aguza- dos, 3-nervios y glandulíferos por el dorso; cápsula ovoidea, peluda, igualando el cáliz y larga de 10"' solamente; semillas apenas mu- cronaditas. JI. Mfurcatus, Cav. JI. bicornis,Mey. 3. Semillas lampiñas ó pubescentes, 4. — Semillas nunca lampi- ñas, pero siempre como algodonosas ; frútice como de 5' de alto, lampiño, 'con hojas deltoídeas, aguzadas, bien festoneado-aserradas, algunas veces lijeramente lobadas; pedicelos axilares algo mas lar- gos que las hojas y articulados hacia en medio ; hojuelas del invo- lúcelo 9-10, lineares, iguales ó mas largas que el cáliz 5-fido de lóbulos aovados con una punta, dos veces mas corto que la corola, cuyos pétalos, largos de 6 á 8'" y abiertos, son de color morado-car- mesí; cápsula ovoídeo-globosa, larga de 4'", peluda, igualando el cáliz, con semillas vestidas de pelo algodonoso-blancuzco. //. 'phos- niceus , Jacq. H. hirtus y unilateralis , Cav. II. Bancroftia- nus, Ham. 4. Arbustos ó frútices, 5. — Plantas anuales herbáceas y que se vuelven como fruticosas, pero no viven mas de un año, 6. 5. Arbusto poco ramoso, pubescente y que se eleva á 10' ó 12' de altura y cuyas flores primorosas grandes, solitarias y axilares mu- dan su color blanco, tiñéndose de rosado que va subiendo poco á poco á medida que adelanta el dia hasta ponerse purpúreas por la TOMO II 16 242 DIVISIOX SEGUISDA. FANERÓGAMOS. tarde; con hojas acorazonadas, palmeadas ó 5 lobas, desig-ualmente dentadas, pubescentes y cuyo peciolo largo es algodonoso, así como las estípulas lineares; calículo de 7 á 9 divisiones; cápsula oval-redondeada y aterciopelada. H. miitaJjüis, L. — Frútice ó ar- busto de 6 á 10' de altura, aterciopelado, cuyas flores amarillo-ro- jizas no cambian de color; hojas acorazonadas, anguloso-sub-trílo- bas, algo dentaditas; pedicelos axilares infraterminales; calículo de 9 á 11 lacinias mas cortas que el cáliz 5-ñdo, con segmentos grandes foliiíceos, aovados con una punta y 5-nervios, casi dos veces mas corto que la corola, cuyos pétalos, largos de 2" á 2" 1|2 y ater- ciopelados esteriormente son abiertos, erguidos j en parte inclina- dos hacia afuera, un poco desiguales y oblongos ; cápsula redondea- dita v trunca á la par, pelierizada, con las semillas lampiñas. H. clypeatiis, L. : C. T. V.. 640. 6. Flores amarillas, T. — Flores, cálices y peciolos color de rosa muy subido, cáliz acresciente y volviéndose como carnosito ; mata ramosísima derecha como de 3 á 4' de alto, cuyas hojas inferiores ovales y aserradas son sin lóbulos, mientras las superiores son 7-lo- badas, algunas púas hay sobre la cara inferior del peciolo ; hojas florales color de rosa y con una glándula por la base de su costilla, estípulas filiformes; flores solitarias y axilares con calículo de laci- nias espesas y como carnosas ; cáliz tuberculoso envolviendo la cáp- sula, sabor ácido. H. sahdarijfa, L.: C. T. V., 580. '7. Flores enteramente amarillas; mata fruticulosa y ramosa, alta de 2 á 4', cuvos ramos estendldos, lare:os y no muchos son como algo aguíjenosos, con las hojas inferiores enteras, velludas y aser- radas, las del medio 3-lobas y por fin las superiores son palmeadas y profundamente 5-lobas y aserradas ; la costilla del segmento del centro tiene una glándula situada por la base de su cara inferior; peciolos tendidos, coloraditos y con aguijones rectos; prim.orosas flores ordinariamente amarillas, pero algunas veces purpúreas, casi sentadas, axilares y solitarias, de cáliz erizado y glanduloso; cáp- sula redondeada, velluda y cubierta por el cáliz; sabor ácido. H. cannahinuSy L. — Mata herbácea al principio , pero que se vuelve semi-leñosa y que parece mucho al precedente en el semblante 3'' aspecto general, pero aterciopelada, con hojas acorazonado-redon- d as- angulosas, con 3 á5 lóbulos cortos y aserrados; pedicelos axi- lares é infra-terminales, articulados, involúcelo con 10 á 12 lacinias filiformes, mas cortas que el cáliz 5-fido, segmentos aovados, con unapuntay 5 nervios, son 3 á 4 veces mas cortos que la corola ama- rilla, con una gran mancha purpúrea interiormente y por la base ; cuyos pétalos, largos de 2'^ 1|2 y lampiños, son abiertos y obovales ; cápsula globosa 5-alada, peluda y mas corta que el cáliz, que se ha vuelto mas grande, cuyas semillas apenas tuberculaditas tienen pe- lito diminuto y esparcido. H. vitifoliiis, L. : C. T. V., 581. G. III. GíOS^iY>i\^'b,idar'bahense, L.. v sus variedades. C. T. V., 644. G. IV. PARiTiUM,St-Hil. Corola amarillento-pálida por la madru- gada, pero cuyo color se va subiendo á medida que adelanta el dia, de manera que después de haberse vuelto anaranjado sigue hasta ponerse rojo oscuro ; c<\psula aovado-globosa ó aovado-oblonga, ve- DICOTILEDÓ^•EOS. — CLASE XLYI. — MALTOÍDEAS. 243 liúda y con semillas peludas ; árljol bastante prrande v alto de 25 á 35', con los ramos estendidos, cuyas ramitas llevan hojas acorazo- nado-redondeadas, grandes, cortamente cuspidadas, enteras, pecio- ladas, Y cuya cara inferior es peluda; ealículo por fin deciduo, al mismo tiempo que el cáliz 8 á 10-dentado y dividido frecuentemente según unas ó algunas suturas hasta el medio ó por del^ajo de él. P. elatum, G. Don. P. macrocarpnm. P. ahitiloides , G. Don. HiMscus elatus, Macf. H. tiliaceus, Tus. II. adntiloides,^^. — Corola siempre amarilla sin cambiar de color, con pétalos obovales; cápsula ovoídeo-redondeadita y tomentosa, cuyas semillas son de ordinario lampiñas ó á veces con pelito diminuto y esparcido. Árbol ó arbusto como de 10 á 20' de altura, bastante frondoso; con hojas acorazonado-redondeadas , ordinariamente cuspidadas, enteras ó apenas festoneaditas, grandes y cuya cara inferior es tomentoso- blanquecina, siendo la superior lampiña y verde; ealículo de ordi- nario 10-fido y á veces 10-dentado ó profundamente 10-fido y per- sistente, con el cáliz algo ipas largo que él. P. tiliaceiim, A. Juss. mUscns tiliaceus, L. H. ariorens, Desc. H. similis, Bl. : C. T. V., 511. G. V. Thespesia, Corr. Flores color amarillo pálido, aveces algo teñidas ó pintaditas de purpúreo, derechas en la axila de las hojas superiores y muy cortamente pediceladas. Árbol que se vuelve á me- nudo bastante corpulento y se eleva hasta 45 y 50' de altura, pero de ordinario su altura es de 20 á 25'. Ramoso y coposo, lampiño y escamoso, con hojas coriáceas acorazonadas, deltoídeas, con una punta, largamente pecioladas, lustrosas y de un color verde amari- llento ; pedicelos igualando los peciolos, largos de 5"-7"-3" ; hojas largas de 3-4-6", sobre 2 lf2, 3 de ancho por la base; segmentos del involucro caducos al abrirse las flores, igualando al cáliz largo de 6'", mucho mas corto que los pétalos oboval-oblongos y largos de 2" 1{2; fruto globoso, algo deprimido como de 15'" de diámetro, con semillas largas de 4'", trigonal-obovales, estriadas, alampiñadas. pero velludas por la base y los ángulos ; cortada al través la cápsula verde pero ya llegada á su tamaño, deja salir una especie de leche amarilla, que en las secas se concreta en una sustancia prieta que nos ha parecido resinosa. T. popubiea, Corr. — Primorosas flores encarnadas, grandes y colgantes, axilares enlaparte superior de las ramitas cuyo pedúnculo es largo como de 2 l\2 á 3". iirbol coposo y no muy corpulento, que se eleva como á 30 ó 40' de altura, con hojas aovadas ó casi redondeaditas, obtusas ó con una punta, sub-acora- zonadas, largas de 6" á 3" 1|2, y casi otro tanto de ancho, 5" á 2 1|2", con el peciolo largo de 6"-8"-3'" ; flores anchas de 4", campa- nudas, con la columna laríja de 2". T. grandijlora.—llibiscus gran- difiorus. L. : C. T. V., 648. Familia 101. — BOMBACFAS. — Arbustos ó árboles muy grandes, muy corpulentos y muy coposos ó frondosos, de hojas sim- ples ó compuestas y dijitadas, alternas y cuyos peciolos mas ó menos largos están acompañados por su inserción de dos estípulas persis- tentes ; flores hermafroditas, solitarias y axilares ó agrupadas de varios modos axilares ó terminales y dispuestas en racimos, en el- 244 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. mas ó en panojas y se componen de un cáliz monosépalo con 5 laci- nias de estivacion empizarrada y algunas veces entero, cuya base suelen acompañar algunas brácteas que á veces simulan un calícu- lo; corola de 5 pétalos regulares é iguales, libres ó reunidos entre sí por la base : algunas veces suele faltar ; 5 hasta 15 estambres ó muchos monadelfos por la base, mientras que el vértice de la co- lumna está partido en 5 ó mas andróforos secundarios cargando cada cual con uno, con tres ó con muchos estambres, de anteras unilocu- lares cuando los estambres son indefinidos, v biloculares cuando de- finidos, con polen liso y estriado. Pistilo formado de 5 ovarios dis- tintos ó soldados entre sí y volviéndose así un ovario único cuvo vértice lleva un estilo simple terminado por su correspondiente es- tigma mas ó menos lobado. El fruto es una cápsula mas ó menos gruesa y de forma variada, con 5 celdas polispermas, abriéndose por otras tantas valvas; otras veces contiene pulpa y se queda in- dehiscente; semillas con frecuencia peludas, bozosas ó algodonosas ó mas veces lampiñas ; embrión sin endospermo, cuyos cotiledones foliáceos son doblados sobre la raicilla. Tribu 1^. — Adansonieas. Anteras uniloculares, alguna que otra vez mellizas; fruto sentado mas veces dehiscente y loculícido, pero sin embargo algunas veces indehiscente y con tripa ; semillas lam- piñas ó bozosas. G.I. AT>A-í^so-síAdigitata,L. : C. T. Y., *754. — G. IT.Eriodendron anfractuosum,'Dc. ; C. T.Y.,371. — G. III. Ochroma lagopus, Sw. : C. T. V., 3T2. — G.IV. Myrodia turbinata, Sw.: C. T. V., 473. — G. V. Pachira aquatica, Aubl, . T. V., 212, — P. insignis, Sav.213. Tribu 2. Helictéreas. Anteras biloculares; fruto sostenido por "un podójino muy largo y filiforme, cuyas celdas largas están torci- dos á manera de hélice y por fin los carpidlos foliculares que la for- man se vuelven distintos v se abren según una línea ventral; semi- Has lampiñas. Helicteres, L. 1. Carpidlos torcidos en espiral y formando una especie de cono leñoso ; anteras 6 ó diez, 2. — Carpidlos rectos, an- teras de 5 á 10 ; arbusto de 8 á 12' de alto, muy ramoso, furfuráceo, con hojas acorazonado-redondeaditas ú aovadas, sinuoso-dentadas, á veces un poco 3-lobas y por fin de cara superior alampiñada, mien- tras la inferior es densamente peluda y largas de 1 á 3" ; flores blancas con el vértice de los pétalos rojizo, dispuestas en corimbos terminales y densos, cuyos pedicelos cortos y glandulosos por la base son ceñidos por dos brácteas lineares, cáliz campanudo, corta- mente 5-lobo y largo de 3"\ 6 veces mas corto que el ginóforo, los 4 segmentos inferiores son redondos y el superior mas largo que ellos ; pétalos mitad mas largos que el cáliz, no orejudos y de limbo oboval y corvo por afuera; celdas de las anteras oblongo-ovoídeas ; fruto linear oblongo y largo de \" á \" 1x2. H. semUriloha, Bertr. II. trapezifolia, A. Rich. 2. Arbustos farfuráceo-tomentosos con flores blancas, 3. — Ar- busto no furfuráceo-tomentoso pero de tallos y ramos largos y en varita, alampiñados, cuyas flores son rojas, en grupos axilares for- mados de 5 pedúnculos que llevan cada uno dos flores mellizas, con DICOTILEDÓNEOS. CLASE XLVI. — -MALVOÍDEAS. 245 dos brácteas por la base, rojo-moraduscas, grandes y dentaditas ; cáliz largo de 1", cónico y con 5 divisiones filiformes, ramositas, coloradas y con pelo blanco por el vértice, apretadito contra la co- rola; está todo cubierto con muchas púas pequeñas, carnositas y morad uscas y también con pelo blanco ; pétalos largos lineares, es- patulados y con el vértice rosado que solo se presenta por la aber- tura del cáliz; columna larga como de 1" 1[2 por afuera del cáliz; con 6 estambres unilaterales ; 5 hojitas verde pálido, derechas, lan- ceoladas y puntiagudas, hipójinas acompañan al ovario que tapan, el cual es ovoideo, pubescente, terminado con 5 estilos largos y fili- formes, cuyos estigmas subulados son amarillentos y transparentes; arbusto muy ramoso como de 10 á 20' de alto, cuyos ramos ó vasta- gos largos llevan hojas grandes algo acorazonadas, sub-aovadas, in- equilaterales, aserraditas, de cara superior alampiñada y cuyo pelo tiesito es estrellado por el vértice, mientras la inferior, mas pálida, es mas peluda, así como las ramitas. G. guasummfolia. 3. Celdillas de las anteras oblongas ; fruto aovado-oblongo, largo de 1" á 1" lj2, tomentoso, de vértice redondeado ó á veces con una punta, pero de base redonda ó sub-trunca, formado como de 10 vuel- tas. Arbusto ó árbol bajito de 4 hasta 15' de altura, ramoso y con hojas acorazonadas, con una punta, festoneadas y á veces abo loba- das, largamente pecioladas y con la cara inferior aterciopelado-pe- luda ; flores en hacecillos pedunculados ó terminales y axilares pau- cífloros; cáliz campanudo, bilabiado y 3 á 4 veces mas corto que el ginóforo, de lóbulos aovados con una punta y como dos veces mas corto que los pétalos no simétricos y orejudos por la base del limbo oblongo. H. Jamaicensis, Jacq, — H. isora, Desc. : C. T. V., 649. — Celdillas de las anteras lineares; fruto linear oblongo y largo de I" 1[2 sobre 4 á 6'" de ancho, de ápice obtuso ó con una punta, for- mado de 5 vueltas ; parte superior de los carpidlos menos torcida; arbusto muy ramoso y como de 12' de alto, con hojas acorazonado- redondeadas ó acorazonado-oblongas, con una punta, aserradas y cuya cara superior acaba por ponerse alampiñada, mientras la infe- rior es peludo-tomentosa; flores en hacecillos pedunculados termi- nales y axilares, pauci ó unifloros, de cáliz tubular-bilabiado, 2-4 veces mas corto que la columna, con segmentos lanceolado-aguza- dos, largo de 8'" y casi dos veces mas corto que los pétalos orejudos por la base del limbo linear é inclinado hacia afuera. B. haruensis, Jacq. H. altliaifolia, Lam. Familia 102. — BUTNBUIACFAS ó BITNERIACEAS — Plantas herbáceas, frútices, arbustos á veces sarmentosos y aguijo- nosos, ó en fin árboles mas ó menos grandes, con hojas simples, en- teras, festoneadas ó dentadas, pecioladas y alternas, ordinariamente pubescentes ó peludas, cuyo pelo es de ordinario estrellado, con es- típulas. Flores herraafroditas siempre caulinares ó en grupos axila- res algunas veces, en racimos opuestos á las hojas ó terminales, que otras veces se componen de un cáliz monosépalo, acompañado con frecuencia de un calículo, y con 5 divisiones mas ó menos profun- das, estendidas y de estivacion valvar; corola con 5 pétalos planos torcidos en espiral antes de la florescencia, cóncavos »'^ irregulares: 246 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. suele faltar algunas raras veces ; estambres monadelfos en número igual, duplo ó múltiple de los pétalos con que está soldado con fre- cuencia el andróforo, cujas anteras bi ó 3-loculares tienen polen liso Y globoso. Pistilo simple formado de un ovario compuesto de 3- 5 carpelos soldados mas ó menos íntimamente entre sí, 1-3-5-locu- lar poliovulado j cuyo vértice lleva tantos estilos libres ó soldados entre sí por la base cuantas celdas tiene el ovario. El fruto es una cápsula mas ó menos gruesa j de forma variada^ pero las mas veces. globosa, cuya base se queda frecuentemente acompañada del cáliz, eon 3 á 5 celdas que se abren por tantas valvas septíferas, poli ó plurispermas, cuyas semillas algunas raras veces están en pulpa de ordinario bastante escasa, con un embrión pequeño casi igual al en- dospermo que le tiene envuelto. Análisis dÍGot ¿mica de lastrihís. 1. Columna ó andróforo mas ó menos pegado con los pétalos, 2. — Columna siempre libre de los pétalos, partida en un número defi- nido de filamentos fértiles y estériles. T. I. Theobrómeas. A. 2. Parte superior ó vértice de la columna pegada con los pétalos por medio de glándulas; anteras solitarias insertas entre los lóbulos del andróforo. T. II. Bitnéíiieas. B. — Columna soldada por la base con las uñas de los pétalos, libre por el vértice que lleva 5 estam- bres, sin filamentos estériles, anteras opuestas á los pétalos. T. III. Hermánieas. C. A. G. I. Gazuma, L. — Árbol muy ramoso, no muy corpulento, de ordinario de 15 á 20' de alto, y no raras veces se eleva hasta40y 50', cuyas ramitas peludas con pelo estrellado llevan hojas oblongo- lanceoladas, aguzadas, semi-acorazonadas por la base, con la cara superior áspera y alampiñada, mientras la inferior es pubescente y de ordinario peluda; corimbos casi dos veces mas largos que los pe- ciolos; pétalos amarillos largos de li2"', con el apéndice igual; fruto sub-drupáceo, ovoídeo-globoso, con 5susquitos apenas notables por su parte superior, de color purpuráceo-negruzco. T. tomentosa, Ktti., etc. — Árbol bastante coposo, menos corpulento y menos alto que el anterior y que se eleva solamente á 20 ó 30' de altura, cuyas ramitas alampiñadas, pulverulento-aleonaditas llevan bqjas oblongo- lanceoladas ú aovadas, con una puntita, oblicuas por la base, lampi- ñas y de cara inferior pulverulenta cuando tiernas; flores algo mas grandes que en el precedente y también en corimbos axilares y como dos veces mas cortos que los pec-iolos ; fruto sub-drupáceo , negro- purpuráceo, globoso y con 5 surcos longitudinales. G. ulmi folia, Lam.iC.T.V., 93-651. G. II. Theóbrama cacao.l.. : C. T. V., 211-650. B. Byttneria, L. — Arbusto sarmentoso, ramosísimo y que se eleva á favor délos vejetales vecinos hasta mas de 20' de altura, cuyo tallo inferiormente sm aguijones y como de 1" á 1" 1{2 de diá- metro es desigualmente cuadrangular, con la corteza cenicienta, mientras los ramos, ramitos, peciolos, etc.. son aguijonoso?. las ra- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLVI. — M:iLVOÍDEAS. 247 mas angulosas por el vértice especialmente, lampiñas y en varita, llevan hojas tiesas, lineares ó íanceolado-lineares, enteras ó algo dentaditas y ásperas por la márjen, con el ápice mucionado, corta- mente pecioladas, sub-alabardadas ó sub-acorazonaditas por la base, que otras veces es aovadita, cuyas inferiores bien alternas son lar- gas de 4-5-3" li2, y anchas de 2-1" li2, mientras las superiores, unilaterales ó dípticas, son mucho mas pequeñas ; peciolo como de 1|2" de largo; flores moraduscas pequeñas, cuyos pedúnculos axila- res salen en número de 3 á 5 de la axila de las hojas superiores, lar- gos como de 6'"; llevan en su ápice algo mas grueso y provisto de algunas escamas bracteiformes 8-10 pedicelos largos como de 2'" j unifloros, formando una especie de umbela pequeña y colgante; seg- mentos calizinales, lanceolados y mucho mas largos que la columna y de 1 á 2'", pétalos sentados, subsesiles ^ ob-acorazonados, con los apéndices claviformes y lineares á la vez, pubescentitos y rojizos, tres veces mas largos que el limbo é igualando el cáliz ; lóbulos déla columna cortos y redondeaditos ; cápsula globosa ancha de 6"' y con púas cortas. B. sabrá, L. £. ramosissimaj scalpeliaía. B. vir- gata, Phl. : C. T. V., *798. — Arbusto cuyo aspecto general parece mucho al del anterior, formando como él malezas impenetrables, pero no se eleva tanto y de ordinario no pasa de 8 á 12' de altura, con las ramitas, pedúnculos y peciolos á la par que aguijonosos algo bozosos ó pubescentes, con hojas aovado-enteras, con una punta ob- tusa, pecioladas cortamente, largas como de 3 á 2" li2. sin contar el peciolo que tiene como 6 á 8'" sobre 2 á \" 1\2 de ancho, mien- tras las de las ramitas florales son óvalo-lanceoladas de 1" á 1 l{2de largo, sobre 6 á 8"' de diámetro, aguzadas y con una punta obtusa, lampiñas y con unos raros aguijones sobre la costilla y por la cara inferior; flores mas jiálidas que en la especie anterior, en grupos axilares formados de algunos pedúnculos, de los que uno siempre mayor que los otros lleva en su vértice una especie de um- belita cuyos pedúnculos secundarios se terminan por pedicelos uni- floros : casi siempre de la misma axila sale una ramita floral larga de 3 á 6'", cuyos grupos axilares también son menos furnidos; cáp- sula cubierta de muchas púas tiesas, punzantes, subuladas y largas de 4-6-7'", diverjentes. B. Caréhage/ie/isis, Jacq., C. T. V,, 798. C. Melochia,«L. — 1. Cápsula de dehiscencia locnlicida ó septí- cida, 2. — Cápsula formada de 5 carpelos, columna 5-fida ó casi en- tera ; frútice alto de 2 á T , alampiñado y pubescente en las ramitas ú otras partes tiernas, d-e hojas aovadas, con una punta, aserradas, largas de 2-3", con los peciolos de las inferiores largos de 1" y los superiores mucho mas cortos que los peciolos, rojo-blanquecinas, de cáliz con los segmentos deltoídeos, con una punta larga de r"l|2, y mas corto que la corola, cuyos pétalos espatulados igualan casi la columna entera y los estilos distintos ; cápsula sub-globosa, sub- comprimida y de 2"' de diámetro, 5-angulosa, peluda, un poco mas larga que el cáliz y cuyos carpidlos distintos acaban por fln por abrirse á lo largo de la línea ventral. M. nodi/lora, S\v. Mongotia nodijlora, Kth. Reidleia nodi flora. De. 2. Cápsula siempre loculícida, con los tabiques adherontes al eje 248 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. filiforme, del cual acaban por separarse ; columna partida hasta la base adherida ; flores en hacecillos axilares ó terminales, purpurá- ceas y desprovistas de involucro, frútice alto de 2 á 5', cuyas ramas están adornadas por una línea lonjitudinal pubescente j llevan ho- jas lampiñas, oblongo-lanceoladas, festoneado-aserraditas y largas de 1' á 2' ; hacecillos florales opuestos á las hojas j paucífíoros, cuyo pedúnculo es casi del largo del pedicelo; cáliz con lóbulos lanceola- dos y aguzados, un poco mas cortos que la corola, amarillos ; son ob- ovales y largos de 3'", estilos sub-distintos, cápsula piramidal, 5- angulosa, cuyos ángulos son aguijonólos por la base j esteriormente, largos de 3'" sobre 5 de ancho por la base. M. pyramidata, L. — Cápsula loculícida ó septícida : columna dividida en fllamentos su- bulados, que están á veces coherentes por el vértice; grupos florales ceñidos por un involucro de 3 hojuelas, estípulas estriadas, aovado- lanceoladas, é igualando el peciolo corto; frútice de como 2 á 3' de alto, ramoso, mas ó menos peludo, con hojas aovadas ó aovado- oblongas, obtusitas, dos veces aserradas , frecuentemente sub-aco- razonadas por la base y largas de 1" á \" 1|2 y cuyo pelo ocupa es- pecialmente las venas; flores en espigas interrumpidas terminales y axilares, de cáliz mitad mas corto que las hojitas lineares del invo- lucro y con segmentos lanceolados y aguzados ; pétalos esertos, pur- puráceos, con la uña amarilla, espatuladas, largas de 5 á 6'" y un poco mas largas que el involucro ; columna partida solamente por el medio, mas corta que los estilos reunidos interiormente ; cápsula velluda, globosa, encerrada en el cáliz, cuyas valvas son largas de V" 1]2. M. serrata^ Benth. M. liirsida, A. Rich. Reidleia ser- TObtcL Vent Familia X^^. — ESTERCULIACEAS. — Árboles grandes, corpulentos y frondosos, con hojas mas ó menos grandes alternas, ora simples, enteras ó lobadas, ora dijitadas, pecioladas, con estípu- las peciolares mellizas; flores apétalas y de ordinario unisexuales por causa de aborto, en racimos corimbos ó panojas, cuyos pedúnculos son axilares ó terminales, las cuales constan de un cáliz deciduo 5- lobo, coroliforme, colorido y valvar; estambres definidos 5-10-15 ó 20, cortamente monad elfos por la base, de columna hipójina y á veces muy reducida, con anteras biloculares, cuyo polen es liso y globoso; ovario que al principio parece único, |)ero formado de 5 carpelos que se separan después, se vuelven distintos, estipitados, uniloculares, polispermos; fruto formado de 3 á 5 carpidlos folicu- lares, cuyas semillas están provistas de un endospermo que contiene un embrión de cotiledones planos y foliáceos, con raicilla inferior aovada v corta. Sterculia, L. — Primoroso árbol, corpulento, coposo y muy frondoso que se eleva á 40 ó 50' de altura, con las ramitas, peciolos y estípulas muy pronto caducas, bozosos; de hojas alternas ó espar- cidas, acorazonado-redondeadas, con 3-5 lóbulos profundos, enteros, ondulosos y grandes, oblongos y aguzado-obtusos, de cara superior lampiña, mientras la inferior es bozosa y cenicienta, largo el limbo de 13 á 15", sobre 8 á 10" de ancho; peciolo largo de 6 á8"; flores en panojas axilares ó terminales de brazos delgados y diverjentes, DICOTILEDÓNEOS. CLASE XLVII. — CROTONÍNEAS. '249 de cáliz o-fido liabta el medio, enteramente bozoso, anchamente aovado, con los segmentos sub-deltoídeos y aljio dobladitos hacia afuera, coroliforme y de color amarillento, con [)iintitos purpúreos, largo de 6 á 8'" y ancho como de 10'" ; columna y estilo corvo, de modo que miran al fondo del cáliz; estambres lo en 5 andróforos se- cundarios y dispuestos en dos series en las flores masculinas; folícu- los lampiños, color aceitunado, aunque fuesen muy bozosos cuando tiernos, apenas pedicelados y largos como de 4" á 4 1|2 sobre 3" de ancho, irregularmente fusiformes, abiertos: su interior es de un pri- moroso color amarillo canario, sedoso por los muchos pelitos tiesos que le (iubren, con 3 á 6 semillas por causa de aborto, ovoideas, negras, lustrosas, largas de 13 á 14'" sobre 5 á 6"' de diámetro. S. Carthagenensis, Cav. : C. T.V., 654. — Árbol del tamaño del prece- dente, casi tan corpulento y tan frondoso como él, de hojas aovado- oblongas, ordinariamente enteras, con una puntita, redondeadas por la base, de cara superior lampiña, mientras la inferior es pu- bescente, largas de 8" á 6"; cáliz profundamente 5-ñdo, amarillento y largo de 4'", furfuráceo esteriormente, cuyos segmentos aovado- lanceolados v abiertos son nectaríieros interiormente; columna con 10 estambres; carpidlos semi-elípticos y por fin estipitados, largos de 1" lj2, cuyo carpóforo es casi tan largo como ellos. S. Carihcea, R. Br. S. iva, Sw. SÜB-DI VISION 11. — OLIGOSTÉMONOS. GRUPO I. UNISEXUALES. CLASE XLVII.— CROTONÍNEAS. Familia 104.. — BUFOEBIÁ C FAS. — V]sinías herbáceas anua- les ó vivaces, matas fruticulosas, frútices, arbustos, arbolitos y has- ta árboles mas ó menos altos y no raras veces bastante corpulentos, cu3^a savia es ordinariamente lechosa; hojas simples, rarísimas ve- ces compuestas, enteras, dentadas, festorieadas y mas ó menos loba- das, ordinariamente alterna?, y sin embargo no rara vez opuestas, lampiñas, pubescentes y velludas, mas ó menos pecioladas, con dos estípulas situadas por la inserción del peciolo : suelen faltar algunas veces. Flores dioicas ó monoicas, cuya florescencia es muy variada, y compuertas de un cáliz monosépalo con 3-4-5 ó 6 segmentos mas ó menos profundos, acompañados interiormente de apéndices escamo- sos ó glandulosos,sin corola alguna; sin embargo, al parecer de algu- nos botánicos, tienen á veces una corola formada de pétalos sueltos ó reunidos entre sí, que los contrarios á esa opinión consideran como estambres abortos y estériles. Las flores masculinas contienen de ordinario muchos estambres, cuvo número muv variado está á veces definido y limitado, mientras que otras veces está indefinido, y con bastante frecuencia cada estambre puede considerarse como una flor masculina, mientras que en otras circunstancias los estambres 250 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGA.MOS. fcon tan pronto libres como mono ó poliadelfos, cuyos filamentos ramosos ó articulados se insertan en un receptáculo ó en el fondo del periantio; alguna vez que otra se hallan escamitas ó pajitas en- tremezcladas con ellos. Las flores femeninas tienen igual envoltura floral j son formadas de un ovario único, las mas veces trígono, tri- locular, libra, raramente sentado, pero de ordinario sostenido por un podójino mas ó menos largo, el cual le tiene bastantes veces por afuera de la flor, saliendo á veces de un disco hipójino, cujas cel- dillas contienen 1 ó 2 óvulos colgantes del ángulo interno, con el tegumento interior espeso; de su ápice sale un estilo, ora único, trífido, con sus correspondientes estigmas bífidos y giandulosos, ora 3 estigmas sentados, oblongos y giandulosos. Fruto seco compuesto de tantas cajitas ó carpelos situados en derredor de una columna ó eje central, del cual se desprenden después de maduros, abriéndose por el ángulo interno en dos valvas, con mayor ó menor elasticidad, cuantas celdillas tenia el ovario; contiene cada uno una semilla mas ó menos gruesa, de figura variada y que bastantes veces parece un insecto; frecuentemente con una carúncula carnosita, situada cerca de su punto de inserción ó sin ella, de cuesco crustá-ceo ó testa bas- tantes veces doble, con un embrión central y homótropo de cotile- dones foliáceos, anchos y llanos, con la raicilla supera, y alojado en un endospermo espeso, carnoso y oleoso. Otras veces el fruto es algo carnoso, indehiscente y parece una manzanita, pero contiene por el centro un hueso con 5 ornas celdillas monospermas. Análisis dicotómica de las tril)2'yS y sul-trihus . 1. Celdillas del ovario con dos óvulos, 2. — Celdillas del ovario con un solo huevecillo, 4. 2. Cápsula loculícida, con los tabiques coherentes, semillas sin carúncula; flores ordinariamente sin pétalos, cuyo cáliz de estiva- cion imbricada contiene 4 ó 6 estambres insertos en derredor de un pistilo rudimentario. T. I. Buxeas. Tricera Icevigaia, Sw. T. citrifolia, W. — Cápsula formada de cajitas ó carpidios, ó fruto ba- ciforme, con las semillas de ordinario sin carúncula; flores las mas veces sin corola, de cáliz cuya estivacion es valvar, 2 á 5 estambres y raras veces en número mayor é insertos en un disco central, libres ó soldados entre sí: tales flores son solitarias ó fasciculadas y axila- res. T. II. FillánteaS, 3. 3. Estambres insertos en derredor de un pistilo rudimentario central. S.-T. I. Dripéteas. Drypetes crocea, Poit. — Estam- bres centrales. S.-T. II. EUFILLÁNTEAS. A. 4. Flores con ó sin pétalos, de cáliz cuya prefoliacion es tan pronto valvar como empizarrada, fasciculadas, racimosas, espigadas ó apa- nojadas; fruto capsular partiéndose en carpelos ó cajitas dehiscen- tes, abayado ó drupáceo, de semillas con ó sin carúncula. T. III. Geotóneas, 5. 5. Inflorescencia centrífuga ó centrípeta, 6. — Inflorescencia ni centrípeta ni centrífuga, pero axilar ó terminal é involucrada, an- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLYíI. — CROTONÍXEAS. 251 drójina, con flores apétalas ó desnudas, cuyos dos sexos, contenidos en un involucro común, figuran una flor única j se componen de una sola flor femenina, de ordinario eserta y cabizbaja, acompañada de algunas masculinas que constan de un estambre único ; semillas con ó sin carúncula. S.-T. I. Euforbieas. B. 6. Inflorescencia centrípeta, 7. — Inflorescencia centrífuga, an- drójina; flores pediceladas y cimosas, cuyas femeninas ocupan el centro; semillas con una carnúcula muy desarrollada. S.-T. III. Jatrófeas. C. 7. No andrójinas, 8. — Andrójinas, flores en racimos espicifor- mes, cu3^o vértice está ocupado por la masculina; semillas con una carúncula cTande. S.-T. IV. Ricíneas. Ricinus commitnis, L.: C. T. V.,5Ó3. 8. Flores monoicas, espiciformes, brácteas masculinas, de ordi- nario plurífloras ; flores apétalas ó desnudas, de cáliz imbricado ó nulo; estambres centrales 2-10, semillas sea con una carúncula sea encerradas en un tegumento esterior que desaparece. S.- T. V. Hip- pománeas. E. — Monoicas ó dioicas, racemosas, cuyas brácteas flo- rales contienen una sola flor ; en las monoicas las flores femeninas ocupan la parte inferior, 9. — Dioicas, ordinariamente en racimos ó espigas; flores masculinas, de ordinario agrupadas algunas en la axila de las brácteas florales ; flores apétalas cuyas masculinas tie- nen el cáliz valvar; semillas globosas ú ovoideas, con una carúncula apenas notable ó sin ella, S.-T. YI. Acalífeas. G. I. Acalyjokacm- pidata, Jacq. C. T. V. 357. — G. II. Tragia voluUlis, L. : C. T. V., 23-397. 9. Semillas las mas veces provistas de una carnúcula. S.-T. VII. Eucrotóneas. E. — Estambres insertos en derredor del pistilo aborto; semillas globosas sin carúncula. S.-T. VIII. Ditaxídeas. — Ditaxis glabella, Gr. — D.fasdculata^ V. A. G. I. CicCA, L. — Flores monoicas entremezcladas las unas con las otras y fasciculadas, cuyos hacecillos laterales están dispuestos á lo largo de las ramitas óraquices sin hojas, por haberse desprendido ellas; filamentos alternos con glándulas esteriores, ovario 3-4-locu- lar, drupa amarillento-deprimida y globosa á la par, y con tantos ángulos cuantas semillas contiene; hojuelas dísticas aovadas, con una punta. C. distica, L. : C. T. V., 6Í7. — Flores dioicas, de ordi- nario axilares, amanojadas, cuyos hacecillos m'.sculinos son multí- floros, mientras los femeninos al contrario contienen solamente 1 á 3 flores, de cáliz dobla'do según su lonjitud, filamentos ceñidos por el di.sco, ovario 3-5-locular, estilo con brazos obtusos, baya globosa; hojitas elíptico-lanccoladas ú obovolo-lanceoladas, obtusas. C. An- tiÜana, Jacq. : C. T. V., 398-617. G. II. Pyllantus, L —1. Cáliz 4-partido en las flores masculinas, y 5-partido en las femeninas, 2. — Divisiones del cáliz en número igual para los dos sexos, 4. 2. Columna estaminal con dos anteras adheridas por el vértice, divaricadas y con las celdillas distintas; estilos 3, ob-acorazonados, deprimidos y foliáceos; estípulas triangulares y persistentes; hace- cillos andrójinos dispuestos á lo largo de las ramitas afíleas y axila- 252 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. res, 3. — Columna estaminal entera, con tres anteras adlieridas y escurridas; estípulas j estilos como en la división precedente ; hace- cillos andrójinos situados lateralmente á lo largo de las ramitasafí- leas; árbol como de 20', cuyas ramas simples llevan hojas aovado- oblongas, con una punta, lampiñas, coriáceas, dísticas, apartadas y largas de 4 á 3"; racimos situados lateralmente sobre el tallo, co- lumna 3-angulosa superiormente por causa del ángulo interno y preeminente de las celdas de las anteras ovales. P. cauUflorus, Gr. 3. Frútice de 2 á 4' de altura, con hojas aovad o-lanceoladas, agu- zadas, lisas., coriáceas, cortamente pecioladas y largas como de 3" ; racimos axilares largos de 3-1, con los pedicelos de 2'": cáliz verdoso- amarillento; anteras con las celdas oblongas. P. episiyUmn, Gr. Epistylium axillare, Sw. 4. Cáliz 5-6-partido, columna estaminal entera, con 3 anteras transversalmente dehiscentes; 3 estilos bífidos; pedicelos axilares, fasciculados ó solitarios y dispuestos á lo largo de lasramita^ afíleas y de los cuales los masculinos son mas cortos ; flores de ambos sexos entremezcladas y cuyas femeninas son mas largas, 5. 5. Arbusto ramoso de 6 á 10' de altura, con hojas elípticas, mem- branáceas, con una punta, de base sub-acuñada, lampiñas ó á veces pubescentitas y largas de 8 á 12'"; estípulas subuladas y marcescen- tes; hacecillos axilares, cuyos pedicelos de las flores femeninas ca- pilares y sub-solitarios son largos de 2 ó 4'"; segmentos calizinales 6, diminutos, aovado-oblongos; anteras sésiles en el ápice de la columna, globosas y contiguas, con las celdillas distintas; cápsula sub-globosa, contraída según las líneas por donde hade abrirse. P. conami^ Sw. P. jñscatorum^ Kth. — Planta herbácea ó fruticulosa, anual, mas ó menos ramosa y alta como de 1' á 1' 1\2, con hojas dísticas, subsesiles, ob-aovado- oblongas, otras veces lanceoladas, ovales ú obovadas, con el ápice redondeado ó mucronado , lampiñas y de cara inferior mas pálida, de ordinario largas de 3 á 4'"; estípu- las setáceas persistentes : pedicelos axilares 1 á 3 y 3 á 6 veces mas cortos que las hojas; segmentos del cáliz 5 y aovados ; anteras sésiles sobre el ápice de la columna, globosas y contiguas; estilos cortos é inclusos; cápsula diminuta, globosa y deprimida, con las semillas estriadas por el dorso llano. P. nuriri, L. : C. T. V., 357. B. G. I. EupHORBiA, L. — 1. Vejetales nunca carnosos y siempre provistos de hojas, 2. — Vejetales carnosos y sin hojas, mata inerme articulada y leñosa inferiormente, con los ramos opuestos 2-alados, con los entrenudos largos de 2 á 8" y anchos de 3'" ; flores en umbelas contraidas, laterales ó terminales, con dos brácteas v dos veces con 3 radios, las universales sentadas, mientras las parciales son corta- mente pediceladas, involucro conteniendo pocas flores y provisto de 5 apéndices petaloídeos, franieados y situados por el interior de los lóbulos. B. alata, Hook. C. T. V., 41. 2. Siempre arbustos ó frútices con las hojas opuestas ó verticila- das, 3. — Arbustos ó plantas herbáceas, 5. 3. Largamente pecioladas, de base igual, bien enteras, cuyo pe- ciolo es articulado hacia la base envainadora; estípulas glandulífe- ras y apenas notables, 4. — Cortamente pecioladas e insertas por el DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLYII. — CROTONÍNEAS. 253 lado interior de una vaina estipular abierta : arbusto ramoso con las ramitas afíleas y provistas;' de vainas lobado-pestañosas densa- mente anulares v larcras de 2"\ cavas hojas opuestas ó temadas salen de las vainas superiores y son pequeñas, espesas, espatulado- lineares, bien enteras, lampiñas y con algunos pelos sobre la costi- lla de la cara inferior y mas largas que los peciolos pubescentitos, largas de 2'" y anchas de 1{2'", sin venas, con el peciolo saliendo apenas de la vaina; pedúnculos simples, cortos, terminales y casi enteramente contenidos por las vainas superiores, mientras los de las femeninas son esertos ; involucro con apéndices diminutos y re- dondeados; cápsula lampiña, semillas sin carnúcula. E . xagimdata. Gr. C. T. V., 42-526. 4. Arbusto muy ramoso que se eleva de 6' hasta 12' de altura y á veces se vuelve un árbol pequeño, cuyas ramas cilindricas, un poco mas espesas en los nudos llevan hojas opuestas ó temadas, aovadas ó aovado-redondas, obtusitas, sub-acorazonadas por la base, lampi- ñas y de cara inferior glauca, largas de 2"-!", con el peciolo de 3"- 1" de largo; flores en cimas ó en panojas terminales pedunculadas y tricótomas ; involucro con 5 apéndices petaloídeos bien enteros y amarillentos, y correspondiendo interiormente á la división de los lóbulos; cápsula lampiña, con las semillas sin carúncula, ovoideas é irregularmente rugosas. E . cotinifolia, L. : C. T. V., 527. 5. Hojas opuestas, cortamente pecioladas, de ordinario oblicuas por la base ; estípulas entrepeciolares trabadas, 6. — Hojas cuyas inferiores son alternas y sin estípulas; involucros dispuestos en gru- pos terminales. 10. 6. Frútices ó yerbas perennes, 7. — Plantas herbáceas y anua- les, 9. 7. De tallos derechos y siempre fruticulosos, 8. — Planta fruti- culosa ó herbácea postrada, lampiña, cuyos muchos tallos salen palmados de la raiz, largos como de 6 á 8", mas ó menos ramosos y formando césped, con hojas óvalo-redondeaditas, oblicuas por la base, redondas por el vértice, bien enteras ó festoneadas, largas de 1|2 á %"' 1^2, estípulas triangulares, ordinariainente laciniadas por la márjen, pedúnculos alados y axilares, simples, solitarios ó á veces temados, involucro con 4-5 glándulas que están de ordinario adornadas con una márjen petaloídea ; cápsulas lampiñas con semilla sin carnúcula, sub-tetrágonas y lisas. É. serpens, Kth. E. cen- tnmculoides, Kth. E, herniarioides, Nutt. C. T. V., 504. 8. Fruticuloso-lampiño, alto como de 1' á 1' ]|2, con los ramos ascendentes, y en forma de varita, cuyas hojas aovadas con una punta y bien enteras son largas de 3 á 6'" y redondeadas ó sub-aco- razonada por la base lijeramentc oblicua; estípulas 3-angulares y laciniadas por la márjen; involucros con 4-5 apéndices petaloídeos, redondeados y glandulosos; lóbulos fimbriados interiormente: cáp- sulas lampiñas, con semillas sin carnúcula. sub-glo])Osas y casi lisas. E . huxifolia, Larn. E . glahrata, V. Sw. 9. Yerbas cespedosas y estendidas por el suelo, 10. — • Yerba di- fusa ó derecha, mas ó menos ramosa y de 1' á V 1|2 de alto, muy peluda por todas sus partes y por eso como blanquecina, con hojas 254 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. semi-aovadas ó aovado-lanceoladas, con una punta, oblicuas por la base, aserradas y largas de 6-12"'; flores en cimas globosas axilares V terminales, cuyos pedúnculos son mas largos que los peciolos j erguidos ; involucro de glándulas diminutas y redondeadas; cápsula peluda con semillas sin carúncula, pálidas, tetrágonas, transversal- mente asperitas con 6 estrias, obtusas. B. pihdifera, L. ^. hirta, L. — B. obliterata, Jacq.: C. T. Y., 715. 10. Yerba pubescente, cespedosa y tendida por el suelo, cuyos tallos ó ramos son largos de 6 á 10", con hojas oblongas, obtusas, oblicuas por la base, aserraditas por el vértice y largas de 2-4'"; in- volucros dispuestos en grupos, cuyo pedúnculo es tan largo como el peciolo; apéndices petaloídeos diminutos, cápsula velluda con semi- llas sin carúncula, bien tetrágonas, transversalmente rugoso-estria- das, con 4 estrias obtusas y de ángulos enteros. ^. maciilata, L. E. Iurma7iniana, Gay., C, T. Y. 6. G- II. Pedilanthus. titJiimaloides, Poit. C. T. Y., 413. -^ Hay 3 variedades de esa planta, que se diferencian por sus hojas. 1' De hojas aovado-redondas. EujpliorMa titliymalGides, Jacq.; 2'' con hojas elípticas, de ordinario aguzadas por sus dos estreñios P. paclifo- Ims, Poit. P. carinatus, Spr. P. tithimaloides y anacampse- roides, Poit. Eiq)h. carinata, B. M.; 3* cuyas hojas son espatu- lado lanceoladas. P. angustifolius, Poit. C. G. I. J ATKOPH A, L.l. Pétalos distintos ó un poco reunidos por la base, abiertos, 3. — Corola seudo-monopétala : estilos reunidos por la base ; estípulas deciduas, 2. 2. Arbusto de ramas rectas no muy ramosas y cuyas ramitas si- guen la misma disposición, alto como de 8 á 12', con la corteza ceni- cienta, de hojas aovado-oblongas, sulvpanduriformes, con una punta ó mucronadas, abroqueladas y sub-acorazonadas por la base, lampi- ñas y largas de 3 á 5", con peciolo largo de 1" 1|2 á 3", é inserto con el limbo como á2'" ó 3'" de la base. Cimas dicótomas estendidas y flojas; corola 5-loba hasta el medio y tres veces mas larga que el cáliz 5-partido ; estambres 10; estilos bífidos. /. liernan difolia, Yent. Curcas Poírtor icen sis, Baill. — Arbusto de 6 á 12' de alto, muy ramoso v cuvos ramos son divaricados v de corteza verdoso- amarillenta, con hojas sub-cordiformes y redondeaditas á la par, angulosas, ó con 3-5 kjbulos apenas pronunciados, lampiñas ó alam- piñadas y cuyo color es verde amarillento, de peciolo tan largo como el limbo que tiene como 3" á 4" de largo. Cimas pedunculadas y axilares terminales, cuyas cimas parciales pediceladas son con- traidas, corola 5-partida, velluda interiormente, amarillcnto-pá- lida, larga de 3'" y dos veces mas que el cáliz 5-partido; estambres 10ál5; estilos bífidos. /. curcas, L. Curcas purgans, Med.: C. T. Y., 528. 3. Flores en umbelas encarnadas terminales; arbusto muy poco ramoso, alto de 5 á 8', con las hojas agrupadas todas hacia la sumi- dad, largamente pecioladas y de limbo grande T-O-partido, algo abroquelado, lampiñas y sin glándulas, con los segmentos pinatíñdos y aguzados y los lóbulos bien enteros; estípulas multipartidas con segmentos setáceos : corola 3 veces mas larga que el cáliz 5-lobo; dicotiledóinEOS. — CLASE xLvii. — crotom'neas. 255 estambres 8-10, con las anteras amarillas ; estigmas con dos brazos. /. multifida, L. : C. T. V.,530. — Frútice ó arbustito de 2 á 6' de alto, muy ramoso, de color verde ó moraduzco oscuro, con hojas 3- 5-partidas, pero de ordinario solamente lobadas, pestañosas j glan- dulíferas por la múrjen, cuyas divit^iones aovadas j con una punta son dentaditas ó enteras, lampiñas ó pubescentitas, lustrosas, lar- gamente pecioladas y largas de 2 1/2 á 3" sobre 2, de ancho; glán- dulas peciolares y estipulares ala vez, ramosas; cimas parciales contraidas ; corola dos veces tan larga como el cáliz 5-partido y cu- yos pétalos reunidos por la base son obovales y color purpúreo os- curo ; estambres 8-12, de anteras amarillas y á veces moraduzcas; estigma con dos brazos. /. gossipifolia, L. G. glaiiclulifera, Roxb. F. elegans, Kth.: C. T. V., 356-525. G. ÍI. Janipha, Kth. — Janipliamaniot, L. — Maniot aÍ2)iytc¿iUs- sima, Pohl.: C. T. V., 206-207. — Este vejetal, tan importante para los paises intertropicales y tropicales, se subdivide en muchas varie- dades, cuyas dos mas importantes y que abrazan á las demás casi como especies, son conocidas con el nombre vulgar de yuca brava ó amarga, y de yuca dulce, y á pesar de que haya tantas diferencias entre ellas que la primera constituye un veneno terrible, mientras que la otra es un alimento enteramente inofensivo ; sin embargo, no hay caracteres botánicos bastante maniriestos y pronunciados para especificarlas y hacer de ellas dos especies bien caracterizadas; sin embargo, se puede llegar á diferenciarlas y á reconocerlas, porque la yuca brava tiene sus ramitas tiernas pentágonas ó á veces acana- ladas, con los ángulos mas ó menos pronunciados, el tallo cilindrico muy nudoso ó quizás mejor provisto de muchos tubérculos esparci- dos sin orden y como aguijonosos, leñosos y punzantes, comprimidos hasta la base de color mas oscuro que el del tallo, que es ceniciento ó gris-parduzco, otras veces mas ó menos verde; peciolos de las hojas y las estípulas que acompañan á su base son color rojo-oscuro, mas subido por su inserción con el tallo; tal color se estiende por la cara superior de los lóbulos de las hojas que tiñe un poco quedán- dose mas pronunciado \iOV las costillas, mientras que no existe en la cara inferior, que es verde mas ó menos oscuro y de ordinario glau- ca ; algunas veces hemos hallado variedades cuj'os peciolos y hojas son enteramente verdes. La yuca dulce que á primera vista parece la brava tanto por su altura como por su aspecto y semblante gene- ral, se puede, sin embargo, con un poco de atención distinguir con bastante facilidad porque su tallo es menos nudoso y de color acho- colatado, teñido de amarillento rojizo, cuyos tubérculos de igual color son mucho mas apartados los unos de los otros que en la brava, menos pronunciados, menos puntiagudos, romos y no tan compri- midos ; además los peciolos son de color de rosa mas su1)ido hacia la axila y el vértice que por la base, por su medio y por la cara infe- rior, cuvo color rosado siírue cstendiéndose por las costillas v ner- vaduras de la cara superior que tiñe bastante con ese color y ade- más la cara inferior está algo matizada de color de rosa; las ramitas tiernas no están nunca acanaladas ni pentágonas tampoco. G. líl. Arsulites triloia, Forst.: C. T. V., 505. •>o6 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. G. IV. SiPHONiA elástica, Pers. Hevea Guianensis, Aubl. D.G. I. Sapium, Jacq. 1. Peciolo con glándulas situadaspor debajo de su ápice, 2. — Peciolo sin glándulas; árbol bajito con hojas ob- aovadas ú oblongas, redondeadas y obtusas por el vértice j cunei- formes por la base, largas de 4" sobre 2" de ancho, cuyo peciolo tiene 8'", sub-enteras por la márjen glandulosa, y al menos con dos glandulítas diminutas sentadas y situadas por arriba de la base, sin puntos transparentes y con las venas principales distantes y alternas con otras mas pequeñas ; estípulas acorazonado-redondea- ditas: racimos laterales, arqueado-filiformes, simples, muchos y largos de 2-3", cuyos grupos masculinos son algo distantes; estilo 2-3-fido. S. cuneatiím, Gr. 2. Dos ó á veces 4 glándulas situadas por el vértice del peciolo ó por debajo de él; árbol bastante alto y coposo, con hojas lanceolado- oblongas, oblongas ó elípticas, glanduloso-dentaditas ó sub-enteras con las principales nervaduras numerosas; estípulas triangulares y redondeaditas á la vez; racimos filiformes terminales. S. aucupa- rium, Jacq. De ese vejetal hay dos variedades : 1^ de hojas con una punta y cortamente aguzadas por los dos estremos; racimos terminales sub-solitarios. Hi¡)2iomane Mglandulosa , Aubl. 2^* De hojas con una puntita ú obtusas y redondeadas por ambos estremos ; racimos terminales ordinariamente agrupados por á 3. Hippomane, My. — Dos glándulas diminutas y sub-globosas situadas por debajo del vértice del peciolo. Árbol de 20 á 50' de altura, bastante coposo y corpulento^ con hojas coriáceas , lustrosas, oblongas, redondeadas por ambos estremos con una punta obtusa, repando-enteras ó apenas festoneadas y provistas de puntos transparentes, con las principales venas numerosas; estípulas semi-acorazonadas; racimos filiformes, terminales^ 3-5-partidos. S. loAiHfolmm , Gr. S. Brownei, Bks. StilUngia laicrifolia, A. Rich. Hippomane higlandulosa, Sw. : C. T. V., 851. G. II. HiPPOMANE, L. Hojas espinosas y cuyo peciolo no lleva glándulas : árbolpequeño, bastante frondoso, cuyas hojas ovalespare- cen las del acebo; fruto amarillo, redondeado y con 4 surcos que lo hacen 4-lobo. H. espinosa, L. — Hojas sin espinas y cuyo peciolo lleva unas glándulas situadas por arriba de la base; árbol de me- diana altura y tamaño, cuyos ramos estendidos y desnudos tienen por la sumidad hojas elípticas, aserraditas ó festoneadas, lustrosas, tan largo el limbo como el peciolo ó dos veces mayor; racimos ter- minales; drupa sub-globosa como de 1" 1\2 de diámetro, no lobula- da, coronada y de color amarillento-verdoso. JI. mancÍ7ieUa, L.: 0. T.Y.,850.' G. III. OMPHALEA,L.Tresestambres; árbol bastante gran de y fron- doso, pero cuya altura y tamaño varían bastante , con hojas oblon- gas, ovales ó cordiformes, lampiñas, con dos glándulas situadas por encima delabase; drupas amarillas, globosas, asurcadas, cuyo diáme- troesde \" l\2.0. to'iandra, L.:C. T, V.,431. — Dos estambres nada mas; arbusto sarmentoso y pubescente, cuyas hojas ovales, oblon- gas y acorazonadas son pubescentes por la cara inferior y tienen dos DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLVII — CROTONINEAS. 257 e^lándulassituadaspor encima de la base. O. diandra, L.: C. T.V.432 ^ IV. Hura crepitans, L.: C. T. V.,490. E. Crotón, L. 1. Racimos cuyas flores femeninas ocupan la parte inferior ó son abortas, 2. — Racimos con las ñores de ambos sexos entremezcladas en sus divisiones. 2. Estambres de 10 á 20. — 3. Estambres de 20 á 50; estilo %4- partido con los brazos simples; semillas lisas. Arbustos ó frútices de hojas glandulíferas por la márjen y por la base, lampiñas ó con pelo estrellado; estípulas glandulosas ó apenas notables, racimos ordina- riamente terminales. Frútice de 1 á 2' de alto, cuyas ramitas pelu- das llevan hojas aovadas ó aovado-lanceoladas, de ordinario con una punta, ondeado-enterasó dentaditas, largas de 1 á 3" y pro- vistas de puntitos transparentes, con la cara superior áspera, mien- tras que la inferior es blanco-tomentosa ó blanco-pubescente, cuya márjen lleva glándulas distantes y dos por la base, las cuales dimi- nutas y globosas son estipitadas ó subsesiles; estípulas diminutas, glandulíferas y caducas; estambres muchos, pétalos blancos ; estilo 4-partido ; semillas ovales apenas estriadas y con una depresión en derredor de la carúncula. C. Jiumüis, L. Var. — C. origanifolins, Lam.,C.T. Y., 239-396. 3. De 10 á 20, ó de 15 á 20 v mas estambres, 4. — De 10 á 15 ó menor número de estambres, 12. 4. De 10 á 20 estambres, 6. — De 15 á 20 ó de 15 á muchos, 5. 5. De 15 á 20, estilos profundamente 8-fidos y con brazos simples, semillas aovado-oblongas, lamipiñas pero con puntitos : arbustos to- mentosos, con pelo estrelliforme ; hojas dentaditas ú ondeado-ente- ras : estípulas deciduas; racimos terminales; frútice de 1 á 5' de alto, con hojas aovadas con una punta, cordiformes por la base, de cara superior tomentosa y áspera, mientras la inferior es peludo- tomentosa y suave, sin glándulas basilares; segmentos del cáliz de las flores femeninas un poco estriados esteriormente. C . astroites, Ait. C. plilomoides, Pers. Lasiogyne astroites, Griesb. — 15 ó muchos estambres; estilo bi-partido, con los brazos simples; árboles pequeños ó arbustos, tomentosos y cuyo pelo es estrelliforme ; flores de ambos sexos entremezcladas, cuyas femeninas en cimitas espe- ciales ocupan el centro de los racimos terminales. Árbol como de 15' de alto, cuyas ramitas son tomentosas y llevan hojas acorazona- do-trífidas, de cara superior estrellado-pubescente, mientras la in- ferior tomentoso-pubescente tiene 2 glándulas por la base ; lóbulos aovados con una punta y bien enteros. C. gossipfolius, Y. 6. Estilos bipartidos ó bífidos, con los brazos simples : semillas lisas y pequeñas ; arbustos ó frútices aromáticos cuyas hojas, vesti- das de pelo estrellado, son provistas de ordinario de dos glándulas : estípulas ordinariamente caducas. "7. — Cáliz de las flores femeni- nas valvar y de ordinario coroliforme: estilos bipartidos con brazos 2-fidos ó 4-partidos, con las divisiones simples ó bífidas; semillas lisas ; arbustos ó frútices aromáticos y escamosos , con hojas bien enteras ú ondeadas y sin glándulas, estipuladas; racimos axilares ó terminales, 11. T(iM(i II i 7 258 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 7. Hojas de dos colores, bien enteras ó dentaditas, 10 — hojas concóloras, 8. 8. Dentadas, alampiñadas ó lampiñas por la cara superior, 9. — Hojas peludo-tomentosas por sus dos caras; frútice muy ramoso de 2 á 3' de alto, cuyas ramitas un poco espesas y con el pelo ama- rillento y estrellado llevan hojas aovadas, aovado-lanceoladas, ó elípticas, de ordinario acorazonadas por la base, obtusitas, muero- naditas, con dos glándulas por la base, concóloras, por causa del pelo, ondeado-enteras, raramente dentaditas j largamente peciola- das ; las glándulas son diminutas estipitadas ; racimos terminales, estambres como 12, semillas sub-tetrágono-ovoídeas, largas de V" V con los ángulos obtusos. C .flavens, L. C . RicJiardi, W. : C. T. V., 239-396. 9. Arbusto cuyas ramitas, peludo-tomentosas, con pelo denso, llevan hojas aovadas, ó aovado-oblongas, obtusitas, profundamente dentadas y con los dientes glandulosos, papiráceas, pelucido-pun- teadas, largas de 8-3", de cara superior alampiñada, mientras la inferior peluda, es por fin verduzco-pálida con algún pelo esparcido y con 2 glándulas escuteliformes, sostenidas por un pedicelo espeso, y situadas por el vértice del peciolo largo de 1 á 2"; racimos ter- minales largos; cáliz de las flores masculinas valvar, mientras el de las femeninas es 5-fido; estambres 12; estilos bífidos. C. corylifo- Ims, Lam. C. moiitanus, Geis. 10. Arbusto de 4 á 8' de alto, muy ramoso, blanco-tomentoso, con hojas lanceoladas, oblongas ó lineares, obtusas mucronaditas, de cara superior verde y áspera, mientras la inferior es blanco-to- mentosa, bien enteras y con 2-3 glándulas cilindricas por la base, largas de 2-2" 1^2 sobre 2-6'" de ancho ; racimos terminfdes ; péta- los blancos y como 15 estambres ; semillas sub-cilíndricas, largas de V" 1¡2, lustrosas y con puntitos. C. cascarilla, L.: C. T. V. 237. — "Variedad con las hojas lineares y las flores á veces dioicas. C. linea- ris, Jacq. — Frútice de 3 á 4' de alto, cuyas ramitas son amarillento- pubescentes llevan hojas cuya figura y tamaño varian muchísimo, lanceoladas ó aovado-lanceoladas, acuminadas, de cara superior ás- pera, alampiñada con pelo estrellado y verde, mientras la inferior es peludo-amarillenta, bien enteras y con 2 glándulas cortamente cilindricas y situadas por la base, largas de 2 3[4, 3, 3 3[4" y anchas de 6 á 8'" y hasta 18'", con puntitos pelúcidos, tres á cuatro veces tan largas como el peciolo que lo es de 6, 12, 15'" ; racimos termi- nales, pétalos blancos y como 15 estambres ; semillas ovoideas, lar- gas de 1'" 1|2, lustrosas, brunas y con ángulos apenas pronunciados por el dorso. C. balsamifer, L.: C. T. Y. 239-396. 11. Hojas concóloras por fin y verduzcas ; estilos 2-partidos, con los brazos bífidos; arbusto de 8 á 20' de altura; muy ramoso y cuyas ramitas color de orin y escamosas llevan hojas aovadas, enteras ú ondeadas, obtusas ó con una punta, lampiñas, color de orin ó pla- teado-pintadas, con escamas distintas, especialmente por la cara in- ferior, con puntitos transparentes, largas de 5-2" y cuyo peciolo lo es solamente de 12 á 2'" \ estípulas evanescentes; racimos simples ó compuestos, pétalos blancos y velludos por la márjen, estambres 10 DICOTILEDÓNEOS. CLASE XLVII. CEOTONÍNEAS. 259 12 ; semillas oval-oblongas, no lustrosas, manchadas y convexas ppr ambos lados C . eJeuteri'a, Sw. C. (jlahellus, L. C . nitens, W.: C. T. Y., 238. — Hojas de dos colores, estilos 4-partidos con los brazos bífidos ó simples ; arl)usto de ramitas plateado-escamo- sas, con el centro de las escamas color de orin ; hojas aovadas con una punta obtusita, algo acorazonadas por la base, ondeado-ente- ras, lampiñas y sin puntos transparentes, largas de 3 á 1" 1^2, de cara superior verde y con escamas plateado-lubtrosas esparcidas por ella, mientras la inferior blanca tiene las mismas escamas lustroso- plateadas confluyentcs, con el peciolo largo de 12-2'" ; racimos sim- ples de lo largo del peciolo : estambres 10 ; flores femeninas con una corola; estípulas espesitas, lineares y algo persistentes. C. pseiido- china, Schl. 12. Estambres en número de 10, 12, quince, 13. — Estambres 8-10; estilos 2-fidos con los brazos simples; semillas lisas; plantas herbáceas y raras veces arbustos, peludas, con hojas aserradas y con glándulas estipitadas , escutiformes y situadas por el vértice del peciolo; estípulas setáceas persistentes; racimos cortos laterales ó terminales. Planta herbácea anual, peluda, cuyas hojas oblongas, obtusas, aserradas y alampiñadas son aproximadas á los racimos cortos y mas largos que ellas : segmentos del eáliz de las flores fe- meninas iguales, espatulado-oblongos, obtusos y casi tan largos como la cápsula aovado-oblonga, cuyas semillas oval-redondeadi- tas, lustrosas, brunas, largas de 1'" lf2 y convexas por ambos lados están provistas de una carnúcula. C. glajidulostis , L. 13. Estambres 10 doce, 14. — Estambres^l2-15; estilos 3-8-fidos, con los brazos simples ; semillas rugosas y oblongas ; plantas her- báceas ó frutices-con hojas de ordinario palmatílobas; estípulas per- sistentes; racimos largos con las flores femeninas fasciculadas. — Planta herbácea anual ó mata fruticulosa, peludita, que se eleva de 2 á 3' de alto, ramosa superiormente, y cuyo pelo es simple, con hojas 3-5-partidas, de segmentos elípticos ó elíptico-lanceolados ; aguzados, aserrados, largamente pecioladas y largas de2á 2 l|2"so- bre ll{2-2"de ancho; estambres 12 á 13, cuyas series interiores son formadas de 2 ó de 3; cápsula tan larga como el cáliz peludo cuyas se- millas, largas de 2'", con verruga gruesa sobre los lados y estriados por el dorso y el rafe son apiculadas por detrás de la carúncula y de un color lijeramente bruno v no lustroso. C . lobatiis, L. Atrrea loUta, Kl.: C. T.Y. 238. 14. Estambres 10-12. Cáliz de las flores femeninas frecuente- mente glandulífero ; estilo 4 ó á veces 6-partido con los brazos sim- ples ; semillas lisas ; arbustos ó plantas herbáceas^ peludas con ho- jas ordinariamente aserradas; estípulas filiformes persistentes y glandulíferas, IG. — Estambres 10-12 solamente ; cáliz de las flores femeninas reduplicativo, valvar por la base; estilos 4-partidos, con los brazos simples ó á veces bífidos; semillas lisas; arbustos aromá- ticos, con hojas bien enteras ú ondeadas, lampiñas, de cara inferior escamosa ó desnuda, estípulas sin glándulas, racimos de ordinario terminales, 15. 15. Arbusto como de 5 á 6' de altura, sin escamitas y cuyas ra- 260 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. mitas lampiñas ó alampiñadas llevan hojas elípticas ó eliptical oblongas, con una punta, obtusas, con puntos transparentes, lai'gas de 3-í", otras veces 6-5", con las venas no proeminentes ; estípulas deciduas ; cáliz alampiñado, el de las flores femeninas tiene los seg- mentos oblongos, obtusos, reduplicativos por la márjen y un poco persistentes por la base, mientras que el de las masculinas imbrica- tivo es mucho mas pequeño y mucho mas pubescente; semillas ovoí- deo-oblongas, largas de 2'", lustrosas y convexas por el dorso. C. lucidns, L. Var. — GlanduUfera, V. 16. Frútice difuso cuyas ramitas algo peludas llevan hojas ovales ú oblongas, obtusas, mucronaditas, bien enteras ó festoneadas hacia el vértice, de cara superior alampiñada, mientras la inferior es pe- luda, con pelo suave, estendido y estrellado, sin glándulas axilares, largas de 12-8'", con el peciolo 3-4; estípulas mas cortas que el pe- ciolo y glandulíferas; racimos terminales cortos y simples, cáliz de las flores femeninas grande, cuyos segmentos son pestañosos y con glándulas estipitadas ; semillas redondeadito-oblongas, largas de V" , lustrosas y de color lijeramente bruno, convexas por el dorso. C. ovalifolius, Vest. C. difusics, Rich. Barhmnia ovalifoUa, KL: C. T. V. 240.. GRUPO II. — HERM AFRODITAS. CLASE XLVIII. — POLIGALÍNEAS. Familia im.—POLIGÁLEAS ó POLIGALÁCEAS. - Plan- tas herbáceas, matas fruticulosas, frútices y arbustos mas ó menos sarmentosos, con hojas simples, alternas, raras veces opuestas, cor- tamente pecioladas ó sésiles, enteras, lineares ó lanceoladas, lampi- ñas de ordinario y sin estípulas; flores no simétricas, solitarias y axilares, ó dispuestas en espigas, racimoso panojas terminales, cuyo pedicelo sale casi siempre de la axila de una bráctea y compuestas de un cáliz de 4-5 sépalos, cuyos dos, ordinariamente mas interio- res, son petaloídeos y coloridos, mientras los tres esteriores, meno- res y verdes, parecen glumáceos; estivacion empizarrada; corola con 3 á 5 pétalos, libres ó soldados entre sí á favor de los filamentos vueltos; andróforo abierto lateralmente, parece amariposada con mayor frecuencia y cuya quila está adornada á menudo de una cres- ta que sin embargo suele faltar no rara vez: estambres hipójinos, de ordinario diadelfos v en número de 8, cuvo andróforo tubular se parte en dos desiguales y ascendentes, con anteras uniloculares que se abren por el ápice á favor de un poro; algunas raras veces son libres y entonces solamente 2-4. Pistilo simple formado de un ovario único, supero, á veces acompañado de un disco hipójino unilateral, de ordinario bilocular, con 1-2 óvulos pendientes, cuyo tegumento esterior es como carnoso, algo comprimido y cuyo vértice lleva un estilo largo, mas ó menos arqueado y terminado por un estigma hueco, bílobo ó unilateral; fruto capsular ó muciforme, l)ilocular ó unilocular por aborto, con las valvas septíferas por el medio de su DICOTILEDÓísEOS. — CLASE XLVIII. POLIGALÍNEAS. 261 cara interna, con semillas solitarias ó 2-3 en cada celda y pendien- tes, frecuentemente provistas de un arillo ó carúncula situada por la base, peludas ó combosas, embrión recto, plano v axil, en un en- dospermo que suele faltar algunas veces; otras veces consiste en una especie de nuez ó de cápsula indehiscente y erizada. G. I. PoLYGALA, L. — 1. Quila provista de una cresta; labio supe- rior del estigma con figura de cartucho y barbudo por el ápice en- corvado; carúncula bi-partida cuyos segmentos son aplicados á la testa ó diminuta, 2. — Quila sin cresta alguna y adherida por la base con los estambres y demás pétalos; estigma papiliforme, ca- rúncula distinta de la semilla, tríloba y escutiforme: los dos sépa- los inferiores mas ó menos reunidos. Planta herbácea anual, delga- da, ramosa, pubescentita y alta de 6 á 12", con hojas linear- lanceo- ladas, puntiagudas, cortamente pecioladas y alampiñadas, largas de 1 á 2" sobre 2-4'" de ancho; racimos elongados y por fin largos de 2", cuyos pedicelos cabizbajos y de ordinario unilaterales llevan cada uno una sola ñor amarillento-purpurácea, con los sépalos infe- riores unidos hasta el medio, cuya quila tiene las alas persistentes y obovales y es un poco mas larguita que los pétalos superiores; es- tilo inclinado y subulado, cuyo estigma es barbudo por debajo del ápice; cápsula oblonga, escotada, lampiña, larga de 2"' é igualan- do las alas, con semillas cilindricas, oblongas y sedosas ó franjeadas por el ápice redondeado. P. OAigustifolia, Kth. P. brizoides. St., hil. C. T. V.,438. 2. Plantas herbáceas lampiñas , 3. — Yerba algo pubescente ó alampiñada, de tallo ascendente, de ordinario muy ramosa, filifor- me y largo de 8 á 12", con hojas lineares, esparcidas, largas de 6 á *8"' y con puntos; racimos elcngados, cuyos pedicelos por fin cabizba- jos llevan cada uno una flor purpurina ó blanca, con las alas oblon- gas, obtusas é igualando la corola ; estilo corto igual al estigma, cuyo labio superior es redondeado y con figura de cartucho, mien- tras el inferior, proeminente, es algo mas corto ; cápsula eliptical- oblonga, cortamente escotada, con semillas negras y redondeadas por ambos estremos y pubescentes, de carúncula bi-partida, cuyos segmentos llegan un poco mas allá del medio de la semilla y son de- ciduos. P. paniculata, L. — P. modesta, Miq. C. T. V., 438. 3. Alta de 8 á 12", de tallo delgado recto, filiforme, con algunas ramas fastigiadas, saliendo por encima del medio, con hojas linea- res, esparcidas, distantes, largas de 6"', cuyas inferiores son mas cortas, pero mas anchas, con glándulas todas; flores purpurinas ó blanquecinas, en racimos terminales, capituliformes, con pedicelos igualando los sépalos inferiores, glandulíferos por la base, y todos membranosos; alas mucronadas, oblongas, 3-nervias, y mas cortas que la corola, cuyo tubo es casi tubuloso y formado por los pétalos reunidos por arriba del medio; estilo delgado, dilatado por el vér- tice, labio superior del estigma grande y con figura de cartucho, mientras que el inferior, corto, es glanduloso; cápsula ao vado- oblonga, obtusita y cortamente escotada á la par y provista por cada lado de una serie doble de glándulas amarillas y situada sobre la sutura por donde se debe efectuar la dehiscencia, con semillas ob- 262 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. cónicas, peludo -sedosas y franjeadas por el ápice, carúncula, di- minuta, cubierta por el pelo. P. longicaiiUs, Kth. P. incarnata, Aubl. P. adenojiliora, De. P. stellera^ Rich. P. aclpressa, Stend. G. II. SecubidacAjL. — Arbusto recto que se eleva á 10 ó 15' de altura y á veces muchísimo mas, sarmentoso, con hojas aovado- lanceoladas, aovadas ú oblongas, coriáceas y de cara inferior pubQs- centita, largas de 1 1|2 á 3'", ordinariamente aguzadas por el vér- tice, con una punta ú obtuso y con las venas preeminentes por ambas caras; flores rosadas en racimos densos, y apanojadas, ter- minales ó axilares, con los sépalos inferiores aovado-oblongos y ob- tusitos, las alas orbiculares é iguales, con la quila cortamente bílo- ba, cuyo apéndice dentadito iguala sus lóbulos, pétalos posteriores espatulados y obtusos; samara aguzada por la base desde el vér- tice sub-tronco, rectilínea por la márjen superior; diámetro lonjitu- dinal del carpidlo mayor que el ancho de la base de la ala. S. erecta, L. S. volíiiüis, L. — Arbusto sarmentoso que se eleva á 15 ó 25' de altura, cuyas ramas largas, delgadas y lampiñas se terminan por muchas ramitas delicadas, racemiformes, largas como de V y ordi- nariamente pendientes, hojas redondeaditas, lampiñas y lustrosas, redondeadas por ambos estremos ó sub-escotadas, largas de 8-10'", cuyas florales son mucho mas pequeñas ; racimos terminales, fili- formes, colgantes, cuyas flores distantes y pintadas, olorosas y lar- gas de 4'", con las alas color de rosa esteriormente y blancas inte- riormente y la corola amarilla, de sépalos inferiores aovado-oblon- gos y obtusos, alas orbiculares igualando la quila cortamente bíloba, cuyo apéndice pestañoso-festoneado ó sub-entero iguala sus lóbulos; pétalos posteriores ob-aovados ; samara rectilínea desde el vértice redondeado hasta el medio, por debajo del cual se va agu- zando, hasta la base; diámetro lonjitudinal del carpidlo, mayor que la anchura de la base de la ala. /S'. virgata, Sw. S.' scandens , Tuss. : C.T. V., 439. O. 111. Krameria ixina, L. : C. T. Y., 103. CLASE XLIX. — GERAXIOIDEAS. Familia 108. — OXALlDEAS. — Plantas herbáceas á" veces fruticosas y muy raras veces arbustos, las primeras tienen á veces las raices provistas de tubérculos feculentos comestibles; de hojas compuestas frecuentemente de tres en rama ó paripinadas, sin estí- pulas, que presentan á veces fenómenos de irritabilidad. Flores amarillas, blancas ó rosadas, axilares ó solitarias y en corimbos ter- minales, que constan de un cáliz con 5 sépalos mas ó menos soldados por la base ó distintos, corola de 5 pétalos alternos, con los sépalos y mas largos que ellos, con uñas cortas, algunas veces coherentes por la base, caducos y de prefloracion torcida. Estambres cuyos filamen- tos dilatados interiormente son monadelfos, cuyos opuestos á los pétalos son mas cortos y frecuentemente estériles, con anteras os- cilantes, bi-loculares y abriéndose por dos grietas lonjitudinales. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE XLIX. — GERA^■IOÍDEAS. 263 Ovario sentado ó provisto de un ginóforo corto j compuesto de 5 carpelos opuestos á los pétalos y reunidos entre sí hacia el eje, con- teniendo un solo óvulo colgante del án|::ulo interno ó algunos dis- puestos en dos series y anátropos; estilos 5 libres ó soldados entre sí por la base, con estigma cabezudo ó bílobo. Fruto capsular de de- hiscencia loculícida con semillas frecuentemente provistas de un arillo ; otras veces es una baya con tantas celdas polispermas ; em- brión recto alojado en el centro de un endospermo carnoso, con co- tiledones foliáceos y raicilla corta y superior. G. I. OxALis, L. — 1. Planta de tallo con hojas, 2. — Planta her- bácea sin tallo, cuyas hojas arrosetadas son todas radicales y con el peciolo largo de 1'' y llevando en su ápice 3 hojuelas sentadas, an- chamente ob-acorazonadas, con un seno estrecho, peludas, y de cara inferior glandulosa, acompañadas de estípulas y saliendo de una raiz formada de tubérculos agrupados; cimas umbelíferas en el vértice de un bohordo y formadas de flores moradas é inclinadas hacia el suelo, con sépalos bi-glandulosos por el ápice, obtusos y distintos; pétalos largos de 8 á 10'"; estambres con pelo, cuyos ma- yores esceden á los estilos peludos. O. martiana, Zuce. O. hi- punctata, Grah. 2. Herbáceas ó fruticosas, de hojas con 3 hojuelas, cuya mediana terminal está distante de las demás, 3. — Siempre herbácea, de ho- jas con 3 hojuelas sésiles y ob-cordadas. Anual, cuyo tallo es ras- trero por la base y difuso, largo de 5 á 8'', ramoso, estípulas pecio- lares ; ñores amarillas en cimas paucífloras ó solitarias en el vértice del pedicelo, que por fin se vuelve corvo; estambres mayores casi tan largos como los estilos; cápsula pubescente con algunas semi- llas. O. corniciilata, L. O. stricta, Sw. : C. T. Y., 578. — Varie- dades : P tallo bajito pariendo estolones que echan raices; hojuelas pequeñas pestañosas, con el seno abierto; pedúnculos 1 ó 2-floros. O. micropliylla, Poir. O. corniciilata repens, Zuce. — 2. Tallo bas- tante largo y ascendente, con hojuelas pubescentes de seno estre- cho, pedúnculos 2-floros y pubescentes. O. jamaicensis, Macf. 3. Plantas herbáceas anuales ó fruticulosas, 4. — Frútice tor- tuoso cuyas ramitas herbáceas llevan muchas hojas pubescentes, con las hojuelas ovales, redondeadas ó escotadas por el vértice, acompañado el peciolo de estípulas ; flores amarillas en cimas umbe- liformes, paucífloras, no mas largas que las hojas, de sépalos distin- tos; esta.mbres mayores y mas largos que los estilos; cápsula oval- oblonga, con 2-3 semillas tuberculosas en cada celda. O. frutescens, L. — O. Phf.míeri, Jcicq. 4. Pubescente, alta como de 12'', cuyas hojas de hojuelas varia- bles, pubescentes ó lampiñas aovadas ó aovado-lanceoladas, obtusas ó con una punta, largas de 8 á 13'" y de cara inferior glauca, son acompañadas de estípulas; flores purpurino-pálidas, pintaditas de amarillo por la base de los pétalos, en cimas corimbiíormes y con pedúnculos bífidos, sépalos distintos; estambres mayores y dellai^o de los Cintiles ; cápsula aovado-oblonga, con 2 ó 3 semillas transver- salmente ásperas en cada celda. O. barrelieri , Jacq. — Lampiña y cuyo tallo, mas delgado que el de la anterior especie, se eleva á 6 ó 264 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓaAMOS, 10", con hojas alampiñadas, cuyas hojuelas ovales ú óvalo-redon- deaditas son redondeadas ó escotadas por el vértice, membranosas y de cara inferior glauca, con estípulas; flores amarillas en cimas corimbiformes y con los pedúnculos bífidos; sépalos distintos; es- tambres mayores y mas largos que los estilos; cápsula aovado- oblonga, con 2-3 semillas transversalmente ásperas, en 4 celdas contenidas. O. sepium, A. St.-Hil. O. hedysaroides, Zuce. O. Plu- mieri, Sieb. G. II. AvERRHOA, L. — Árbol muy ramoso, alto como de 10' á 15', cuyo tronco y ramos son floríferos y fructíferos, de hojas cuyo raquis largo de 7 á 10" y pubescente, lleva hojuelas alternas, cortísima- mente pecioladas, aovado-lanceoladas ó lanceoladas, de base redon- deada, un poco cordiforme y algo inequilateral, de cara superior lampiña, mientras la inferior es pubescente y como aterciopelada dobre la costilla, que es color aleonado, aguzadas y puntiagudas por el vértice, largas de 1 l|2-2-3" y anchas de 6 á 8'", las de la base son las menores, las de la parte mediana de las hojas mayores y las del vértice algo menores que ellas; flores rosado-rojizas, en racimos simples ó por grupos saliendo de la corteza del tronco ó de los ramos, con los cálices pubescentes, limbo de los pétalos oval-oblongo , es- • tambres 10; frutos un poco claviformes, con 5 ángulos obtusos y poco pronunciados, de color amarillo pálido teñido de anaranjado, lam- piños y lustrosos, largos como de 2 li2 á 3", sobre 1 1|4 á 1" de diá- metro.^, hilimii, L. : C. T. Y., 519. — Árbol casi delmismo tamaño y altura que el anterior, pero de copa mas redonda y de aspecto mas bonito, con hojas cuyo raquis lampiño, largo de 4 á 5" lleva ho- juelas alternas, muj^ cortamente pecioladas, desiguales entre sí, de base redondeada, inequilateral, cuyo lado superior mucho mas ancho es algo dilatado en ángulo redondo, mientras que el inferior, apenas pronunciado, parece huirse, aovadas ó aovado algo lanceoladas, ú ovales, con una punta, lampiñas por ambas caras, con la costilla sin embargo un poco pubescente interiormente, largas de 1 1^2, 2, 2" 1{2 sobre 1" 1|2 de ancho y casi aovadas, un poco triangu- ares : las de la base son largas solamente de 8 á 6'" ; flores rosadas en racimos apanojaditos, axilares y terminales, con los cálices lam- piños y el limbo de los pétalos sub-redondeado ; 5 estambres ; frutos del tamaño de un huevo pequeño de gallina, cuya forma tiene casi, amarillos y con 5 ángulos aguzaditos. A. carambola, L. Familia 109. — TROPCEOLEAS. — Plantas herbáceas, difu- sas, volubles ó enredaderas, lampiñas y á veces glaucas, cuyas ho- jas simples y sin estípulas son alternas, largamente pecioladas, pec- tinervias y abroqueladas; flores axilares, solitarias, de ordinario largamente pedunculadas y formadas de un cáliz 5-partido colorido, cuya lacinia superior tiene la base prolongada en espolón libre abierto por dentro de la flor ó á veces por fuera de los estambres, mientras los otros lóbulos son tan pronto libres como reunidos entre sí, de varios modos ; corola de 5 pétalos insertos en la garganta del cáliz y con cuyos segmentos alternan, desiguales, irregulares y de los cuales dos son superiores, un poco apartados de los otros y si- tuados en la boca ó fauce del espolón, mientras los tres inferiores DICOTILEDÓNEOS.— C'LASE L. RUTÍNKAS. 265 unguiculados son menores y hasta suelen abortar algunas raras ve- ces : hay 8 estambres, cuyos filamentos libres son aplicados contra el ovario é insertos en el disco, con anteras terminales, oblongas, erguidas, bilo.iiilares y abriéndose por una grieta doble. Pistilo sim- ple formado de un ovario, con tres carpelos adheridos con la l)ase del estilo ó con el eje del fruto, uniloculares y monospermos: fruto formado de 3 carpelos algo carnositos reunidos hasta la madurez, porque entonces se separan, son indehiscentes y contienen una se- milla única gruesa, sin endospermo y cuyo embrión mayor tiene co- tiledones rectos, espesos, distintos, cuando tierno, mientras que mas tarde están reunidos entre sí ; sin embargo, por la. parte inferior quedan distintos, raicilla escondida entre ellos y con 4 tuberculitos. Trofceolum, L. — Planta herbácea algo trepadora, de hojas bas- tante grandes, largamente pecioladas, abroqueladas, orbiculares, sub-5-lobas, cuyas nervaduras salen á manera de radios del punto de inserción del peciolo, algo lateral, cara superior lampiña y verde subido, mientras la inferior lijeramente pubescente es mas pálida. Flores grandes, hermosas y color de fuego, cuyos pedúnculos son largos de 4á 6"; los dos pétalos superiores, mayores, obovales y ob- tusos, se estrechan insensiblemente por la base, hasta volverse una uña, mientras los tres inferiores, mas largos, ovales, redondeados y enteros, tienen uñas mas estrechas, casi tan largas como el limbo, cuya parte inferior es pestañosa por los bordes. T. majiis, L. — Yerba enredadera de tallos largos, delgados , muy ramosos, lampi- ños y moraduscos, que llevan hojas largamente pecioladas, abroque- ladas, truncado-orbiculares, con 5 lóbulos redondos ó quizás mejor 5-festoneados, con los dos superiores laterales y mas pequeños, con una puntita ó un punto amarillo por el vértice y correspondiendo con la nervadura; cara superior lampiña, algo glauca, así como la inferior, que además es mas pálida y con las nervaduras, nervios y venas muy pronunciados. Flores muy bonitas, ni pequeñas ni gran- des tampoco, mas pálidas que las de la especie anterior, axilares ó en racimos terminales, paucíñoros, largamente pedunculadas. limbo franjeado ó con muchas lacinias desiguales, cuyas inferiores son setiformes; la flor tiene como 10'" de diámetro. T. maiíritziamim . — Cachipillo, Vzla. CLASE L.-RUTÍNEAS. ^ Familia 110. — SIMARUBEAS ó SIMARUbAcEAS. — Árboles mas ó menos pequeños, ó arbustos, con hojas compuestas y pinadas de ordinario con un impar; flores blancas, verdosas ó roji- zas, en racimos ó en cimas axilares ó terminales, hermafroditas, polígamas ó unisexuales y regulares, formadas de un cáliz con 4 ó con 5 divisiones mas ó menos profundas, corola con 5 pétalos de prefloracion torcida; estambres ordinariamente saliendo de una es- cama hipójina en número de 3-5-8-10, con anteras biloculares y muy rara vez 4-loculares. Pistilo compuesto formado de 2-3-4-5 ovarios distintos, uniloculares, con el óvulo pendiente, estilos dis- tintos por la base y saliendo del vértice de los ovarios, algunas ve- 266 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. ees uno solo, por estar soldados entre sí, terminado por un estigma 4-5-1o1jo ; fruto compuesto de tantas drupitas cuantos ovarios habia, cujeas semillas, de tegumento membranoso, tienen un embrión sin endospermo, recto y con cotiledones espesos, de raicilla superior corta V escondida entre ellos. G. I. SiMARUBA, Aubl. — Árbol alto de 40 á 50', con las hojuelas oblongas ó lanceólado-oblongas, mucronadas, con una punta obtu- sita, bien enteras, lampiñas ó pubescentes interiormente, largas 2, li4, 3,2" sobre 2, 21i4, l'Vle ancho, con el peciolo de 1|2'", desigua- les, verdes por ambas caras, panojas mas cortas que las hojas, pétalos abiertos. /S'. amara, Aubl. 8. ofjicinalis, De. :C. T.Y., 162. — Árbol como de 20 á 25' de altura, con las hojas de hojuelas espatu- lado-oblongas ó lanceoladas, redondeadas por el vértice, lampiñas j de cara inferior pálida y glauca, largas de 2" 1[4 por el vértice, 1" 2í3 por la base, anchas de \" 1[4-1 1|2, con el peciolo de 4'"; flores amarillas en panojas, casi tan largas como las hojas, y de 2" li6-3, con los brazos inferiores de 1", de cáliz largo apenas de V" , con los pétalos abiertos, largos de 3'", oblongos, obtusos y torcidos; drupas bi-anguloso-ovoídeas , purpurino-oscuras, secas, leñosas y largas de 8'". S. glauca, Kth. ;S'. officinalis, Macf. S. medicinalis , Endl. : C. T. V., 163. G. II. PicRAMNiA, Sw. — Hojas con 7-9 hojuelas aovado-lanceola- das ó lanceolado-elípticas, con una punta obtusa, de cara inferior lampiña ó pubescentita y alampiñada, con las principales venas preeminentes, largas de 4-2" y papiráceas; arbusto ramoso que se eleva como á 8-10' de alto, cuyas ñores son dispuestas en racimos pubescentitos, filiformes, pendientes, dos veces ó mas largos que las hojas, formados de grupos algo distantes y largos de l"-2", con tres pétalos blanco-verdosos, largos de 1'" y mas cortos que los es- tambres ; bayas ovoideas, por ambos estremos obtusas, largas de 4- 5'" y anchas de 3'", encarnadas y por ñn negras y lustrosas. P. an- tidesma, Sw. : C. T. V., 124. — Hojuelas 5-7 aovado-oblongas, con una puntita, lampiñas, papiráceas, lustrosas, largas de 2-3", con venas reticuladas por ambas caras; arbusto de 10 á 15' de alto, cu- yas flores son dispuestas en racimos pendientes, frecuentemente di- vididos hasta la base \ casi tan largos como las hojas, con pétalos 5-oblongos-lineares, mas cortos que los estambres y largos de 1'" ; bayas oblongo-ovoídeas ú ovoídeo-redondeadas por ambos estre- mos, largas de 5'" y anchas de 3'", rojizas y por fin azul-oscuras ó negras y lustrosas. P. pentandra, Sw. P. micrantha, Tul. : C. T. V.,751. G. III. Simaba, Aubl. — Árbol alto de 20 á 25', de tronco delgado, recto y cuyos ramos dispuestos hacia la sumidad á manera de um- bela llevan hojas largas de mas de 2', imparipinadas, con 15 ó 20 pares de. hojuelas desiguales, las de la base menores, las del medio mayores y las del vértice como intermedias, elíptico-lanceoladas, casi sentadas j alternas sobre el raquis bastante grueso y color aleonado, algo aguzadas por el ápice, terminado por una glándula redonda, bruna, lisa y lustrosa, de base redondeada y algo inequi- laterales, enteras y con los bordes algo doblados hacia abajo, lam- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE L. — RUTÍNEAS. 267 pinas, largas de 8" las mayores y de 3 á 2" las menores y de 2-2 1{2- sobre 1 \\2 de ancho. Flores largas comode I" , de color blancoun poco aleonadito ó verdoso-amarillentitas, sub-aterciopeladas, solitarias, un poco distantes y casi sésiles sobre los brazos largos que forman la panoja piramidal que termina los ramos, larga como de 3' y hasta mas: cáliz 5-dentado, pétalos lineares, largos como de 1", es- teriormente aterciopelados, cóncavos y con un dientecito en el bor- de interno : estambres 10, de los cuales 5 son mayores y todos mas cortos como de 2'" que la corola ; escamas estaminíferas casi tan largas como los filamentos, que se separan del 1^4 superior de su cara superior y siguen libres, cargando una antera grande bi-locular y pegada en el ápice por el medio de su dorso, formando un tubo en el centro de la flor, separándose las unas de las otras solamente al desprenderse después de la fecundación, aterciopelado-velludas; estilo mas largo que los estambres y sin embargo un poco mas corto que los pétalos, cuyo estigma puntiforme es poco notable. Fruto drupáceo del tamaño de un huevo de gallina y hasta mucho mas grueso, algo carnoso, oval-aterciopelado, monospermo y con olor desagradable. >S'. cedroii, Planch . C. T. V.,'749. — Árbol mediano cuyas hojas tienen 3-7 hojuelas espatulado-escotadas, apenas veno- sas, sub-coriáceas, largas de 3-5-6-1" 1|2, y anchas de 2 l\2-3-l 1|2, las inferiores siendo siempre menores que las superiores, subsesiles y de ordinario opuestas ; ñores en racimos solitarios formando pano- jas terminales, cuyos pedúnculos son polvorientos; pequeñas, soli- tarias ó agrupadas por á 3, largas como de 2'" , pelitiesas, cuyos pe- dicelos cortos salen de la axila de una bráctea decidua; cáliz mucho mas corto que los pétalos, filamentos mucho mas largos que las es- camas oblongas, peludas y sueltas; ovarios tan largos como el ginó- foro ; estilo corto y simple; carpidlo único por aborto, inequilateral, aovado, lampiño y largo de 10-12'". S. orinocensis, Kth. S. giiia- nensis, Planch. C. T. V., 750. G. IV. QuASSiA amara, Lf. : C. T. Y., 161. — G. Y. Picrcena excelsa, Ludí. : C. T. Y., 163. Familia 111. — DIOSMFAS ó CÜSPARIEAS. — Plantas herbáceas, matas, arbustos y árboles mas ó menos altos, mas ó me- nos corpulentos y coposos de hojas alternas y compuestas, cuyas ho- juelas opuestas ó pinadas, están frecuentemente provistas de puntos glandulosos, sin estípulas; flores regulares ó irregulares, herma- froditas y dispuestas en corimbos ó en espigas ó panojas terminales ó axilares, blancas ó rojizas y que se componen de un cáliz con 4-5 segmentos mas ó menos profundos, de una corola con 4-5 pétalos, de ordinario libres ó á veces soldados entre sí, los cuales suelen faltar enteramente alguna vez que otra; de prefloracion imbricada ó valvar; estambres hipójinos y algunas raras veces períjinos, en 1 ó 2 series y en número duplo de los petalos ó igual , por causa de aborto parcial de algunos , cuyos filamentos ca- recen de apéndice ; pistilo formado de carpelos en igual ó menor número que el de los pétalos libres ó soldados entre sí y volviéndose un ovario único plurilocular, cuyas celdas contienen de ordinario dos huevecillos sobrepuestos, con otros tantos estilos enteramente 268 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. soldados entre sí ó libres hasta su parte superior, que está soldada sola j terminándose por un estigma, con tantos lóbulos cuantas cel- das hay ; fruto formado de carpidlos ó cajitas 4-5, cuyo endocarpio al madurarse ellos se desprende con elasticidad j simula una valva leñosa, semillas con tegumento crustáceo, ora conteniendo en el eje de un endospermo carnoso un embrión cilindrico ó con cotiledones anchos, otras veces está sin endospermo y el embrión tiene sus co- tiledones tan pronto rectos v espesos, como delgados y ajados ó con- duplicados, otras veces doblados de tal modo, que sus dos mitades abrazan en su pliegue la raicilla, que es siempre superior. Tribu 1\ — PiLOcÁEPEAS. — Flores regulares, polipétalas, isos- témonas ó diplostémonas, con estambres hipójinos; el número de los ovarios iguala al de los pétalos, contienen dos óvalos v son distin- tos, así como los estilos, pero por la base sola, ó mas veces soldados entre sí; endospermo nulo; árboles ó arbustos de hojas simples ó compuestas. E v odia felrif liga, A. St.-Hil. — Árbol del Perú que contiene cinchonina. Tribu 2^ — EucuspÁRiEAS. — Flores regulares ó irregulares, frecuentemente seudo-monopétalas, de estambres hipójinos ó epipé- talos en igual número que los pétalos, todos anteríferos, ó de los cuales, algunos deformados son estériles; ovarios en igual número también, bi-ovalados y distintos, así como los estilos, pero por la base sola; endospermo ninguno: embrión cuyos cotiledones doblados sobre la radícula son por lo común conduplicados y ajados; árboles y arbustos de hojas compuestas. Bonplandia trifoliata, C. T. V., 756. — MoNNiERA trifoliata, C. T. Y. 532. Familia 112. — RÍITACEAS. — Plantas herbáceas , arbustos y á veces árboles, cuyas hojas, compuestas ó descompuestas, son al- ternas; flores regulares en cimas ó'racimos terminales y compues- tas de un cáliz, con 4-5 divisiones mas ó menos profundas, de una corola con otros tantos pétalos de prefloracion empizarrada. Estam- bres hipójinos en número duplo ó triple de los pétalos y cuyos fila- mentos son sin apéndices. Pistilo formado de 3-5 carpelos libres ó soldados entre sí hacia el eje, conteniendo 1-2 ó mayor número de óvulos, colgados del ángulo interno ó adheridos por su cara ventral : otros tantos estilos hay tan pronto soldados enteramente como dis- tintos por la base, terminados por un estigma 3-5-lobado, en el primer caso, ventero en el segundo; fruto capsular ó formado de cajitas indehiscentes, cuyas semillas están colgantes ó adheridas, de embrión algo arqueado, con radícula superior y cotiledones acha- tados y envuelto en un endospermo carnoso. Ruta chalepensis, C. T. Y., 28-331. Familia 113. — ZIGOFILLEAS. — Plantas herbáceas, arbus- tos y árboles altos y corpulentos, cuyas hojas compuestas y pinadas son opuestas y acompañadas de estípulas, sin glandulitas transpa- rentes; flores hermafroditas, solitarias y axilares, en racimos ó en panojas terminales, tan pronto blancas y azules, como rojizas y amarillas, las cuales constan de un cáliz con 4-5 sépalos distintos, de prefloracion empizarrada; corola de 4-5 pétalos libres y ordina- riamente imbricados y regulares; estambres en número duplo y DICOTILEDÓNEOS. — CLASE L. — RUTÍNEAS. 269 raras veces igual con los .pétalos, liipójinos dispuestos en 1 ó eu 2 series, distintos y cuyos filamentos tienen la base alíro dilatada ó acompañada de un apéndice con que suele soldarse alguna que otra vez. El pistilo se compone de un ovario simple, situado sobre un disco glanduloso j acompañado de tantas glándulas v tantos surcos cuantas celdas tiene interiormente, conteniendo cada una dos óvulos ó mavor número, por lo regular colgados del ángulo interno, y su vértice lleva un estilo único simple, con un estigma 4-5 -lobo: otras veces hav 4-5 estilos distintos y cada uno terminado por su estigma correspondiente. Fruto carnoso ó capsular, que en este último caso se abre en otras tantas ventallas ó en otras tantas cajitas que se des- prenden y opuestas con los tabiques, cuyas semillas, de tegumento delgado y herbáceo, con epispermo cartilajinoso, que suele faltar bastantes veces, tienen el embrión verdusco, con cotiledones foliá- ceos Y radícula superior. Tribu 1\ — Tribúleas. — A. Carpelos ó cajitas ordinariamente subdivididas en celdillitas monospermas por medio de tabiques trans- versales; semillas sin endospermo. Tribulus, L. — Cáliz deciduo, carpidlos 5, divididos interiormente en segmentos monospermos por tabiques transversos; yerba vivaz cuj'os tallos divaricados, estendi- dos y largos como 6 á 12", llevan hojas largas de 4" 1|2, 3 ú 8 apa- rejadas, con hojuelas cortamente oblongas, desiguales, cuyas infe- riores son menores y las superiores mayores, largas de 1", 1" 1|2 sobre 8 á 10'" de ancho, de cara inferior como sedosa. Pedúnculos largos como las hojas unifloras; cáliz de sépalos lanceolado-aguza- dos y mitad mas corto que los pétalos, largos de 8 á 10'", imbrica- dos, amarillos, ob-acorazonados y largos de 1" 1{2 sobre 1" de an- cho. Estambres 10, carpidlos 3-5-espermos, separándose del eje no central, tuberculados, con dos espinas diverjentes ó con 1 sola. T. cistoidcs, L. : C. T. Y., 370. — Cáliz persistente, carpidlos 10-12, separándose del eje central, monospermos; yerba anual algo fruti- culosa, de tallos ramosos divaricados, tendidos sobre el suelo y lar- gos de 10 á 15" y hasta mas, con la sumidad ascendente á veces, de hojas con 2-3 ó 4 pares de hojuelas oblicuamente oblongas ú ovales, con la cara inferior peluda, largas de 1, 1[2" sobre 8,10"' de auclio, estípulas lanceolado-lineares; pedúnculos casi tan largos como las ho- jas, unifloros y erguidos, sépalos subulados y apenas mas cortos que los pétalos, de color blanco-amarillento sucio. 10-carpidios estria- dos, tuberculados é inermes. .Z'. -í/¿rt^7mí^í, L. T. decolor, Macf. : C. T. V. 370. Tribu 2^ — EuzíGOFÍLLEAS. — Celdas no partidas por tabi- ques ó indivisas, cuyas semillas están provistas de un endospermo. Gr. 1. GuAYACUM, L. — Ái'bol mediano ó bajito, ramosísimoy primo- roso, de hojas con dos pares de hojuelas ol>ovales, obtusas, siempre verdes y lampiñas, largas de 12-6"' ; sépalos ovales persistentes y tres veces mas cortos que los pétalos espatulados azules y largos de 6"'; fruto aovado-redondeadito y retuso. Cr. officiiiale, L. : C. T. V., 404. — Árbol algo mas alto y mas corpulento, de hojas con 4-5 pares de hojuelas oblicuamente lanceolado-elípticas ú ob-aovadas, con una punta ú obtusas, largas de 12-8'", sépalos ovales, lampiños, 270 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. mitad mas cortos que los pétalos ob- aovados y largos de 6'"; fruto ob-aovado redondeadiio y mucronado. S.sanctiwi, L. : C. T.V.404. G. II. Zygofillüm arboreum, L. : C. T. V. 407. ^ Familia lU. — ZANTOXIZFAS ó ZANTOXIZACFAS. — Arbustos ó árboles mas o menos altos, corpulentos y coposos, cuyas hojas opuestas ó alternas, son ordinariamente compuestas é impari- pinadas, con puntitos glandulosos, transparentes y sin estípulas; flores unisexuales ó polígamas regalares, en racimos ó en panojas axilares, ó las mas veces terminales, que se componen de un cáliz, con 3-4-5 divisiones mas ó menos profundas, de una corola con 3- 4-5 pétalos que algunas veces suelen faltar; las masculinas contie- nen tantos estambres liipójinos cuantos pétalos hay y á veces en nú- mero doble, con filamentos libres, tan pronto simples como provistos de un apéndice é insertos por debajo de un ovario rudimentario. En las femeninas se observan unas veces los rudimentos de los estam- bres acompañando á igual número de ovarios como pétalos hay, otras veces en menor número é insertos en un disco, distintos ó sol- dados entre sí y con dos óvulos cada uno : hay otros tantos estilos libres ó soldados mas ó menos completamente, los cuales suelen fal- tar algunas veces, con estigma simple ó lobulado. Fruto tan pronto simple, carnudo ó membranoso, como compuesto y formado de algu- nas cajitas ó carpelos, drupitas cuyo j)eri carpió leñoso en mayor parte se desprende al llegar la madurez, con semillas de tegumento lustroso, espeso y crustáceo, alguna rara vez aladas, formadas de un embrión recto ó arqueado, con radícula superior y los cotiledo- nes ovados y aplanados, alojado en un endospermo carnoso. G. I. Fagara, Jacq. — 1. Aguijones estipulares recorvados, hojas con 4-6 pares de hojuelas, 2. — Aguijones estipulares rectos, hojas con 1-3 pares de hojuelas ovales ó espatuladas, escotadas ú obtusas, bien enteras, lampiñas, coriáceas, largas de 6-3'", con dos tubérculos situados por la base de su cara inferior, de raquis inerme y con las articulaciones lanceoladas; flores en glomérulos cortos; carpidlos 2-1-globosos, mucronados, subsesiles, con V" I¡4 de diámetro. Ar- busto de 15 á 20' de altura, tortuoso, con muchas hojas y ramoso, cuyos aguijones son largos de 1'". F. microphylla, Desf. F.jjte- rota, L. Zantlioxylum spinifix, Jacq. : C. T. Y. 30-406. 2. Arbusto alto de 5' á 8', ramoso, cuyas hojuelas espatuladas, obtusas, bien enteras, lampiñas y coriáceas, son largas de 6 á 3'"; raquis provisto de un aguijón solitario, situado por la base de los pares de hojuelas y con los artejos espatulados; flores en glomérulos. F. tragocles, Jacq. — Arbusto alto de 15' á 20', cuyas hojuelas ova- les ú ob-aovadas, escotadas ú obtusas y festoneadas son lampiñas, con puntos transparentes, situados especialmente por debajo de los festones y con dos tubérculos por la base de su cara inferior y largas de 12-5'", cuyo raquis formado de artejos lanceolados es inerme; flores en glomérulos oblongas; carpidlos 2-1 globosos, mucronados y tan largos como el carpo foro. F. lentiscifoUa, W. F . 'pterota, L. — Zanthoxylum pterota, Kth. C. T. V. 31. G. II.Zanthoxylum, L. — 1. Estigma abroquelado por cohesión y subsesil, 2. — Estilo simple, distinto en las flores masculinas; hojas- DICOTILEDÓNEOS. CLASE LI. — HESPERIDÍNEAS. 271 unifolioladas ; árbol miív ramoso y cuvas ramas carí?an muchas ho- jas elípticas bien enteras, lampiñas, con muchos puntitos transpa- rentes, largas de 3-1" 1{2, obtusitas v venenosas, cuyo peciolo arti- culado por debajo del ápice es largo de 10-4'"; flores en panojas terminales, abiertas, casi tan largas como las hojas, lijeramente pu- bescentes, de cáliz diminuto y 5-fido; pétalos apenas largos de V" é iguales con los 5 filamentos j el estilo; en las ñores masculinas 3 ovarios coherentes v rudimentarios hay situados sobre un ginóforo mas corto que el estilo. Z. ocroleucum, De. 2. Hojas con 9-6 ó 6-2 pares de hojuelas mas ó menos festonefi- das, 3. — Hojas con 5-10 pares de hojuelas bien enteras ó finamente aserraditas, lanceolado-oblongas, subsesiles, con una punta, cuyas inferiores son á veces elípticas, largas de como 1 1|2 á 2; de cara su- perior lampiña, mientras la infe rior es pul^escentita á lo largo delai nervaduras ó alampiñada, provi tas de puntos transparentes espar- cidos, cuyo raquis pubescentito tiene aguijones cortos y rectos; pa- nojas terminales ó axilares, pubescentes y de 2-4" de diámetro; ovarios 5 coherentes por el eje, carpidlos 5 ó 2 erguidos, sentados, largos de 3"' é insertos en un eje cónico y central, con el endocar- pio delgadito por la márjen. Árbol de 25 á 50' de alto, corpulento y coposo, cuyo tronco y ramas están armados de gruesos tubérculos có- nicos terminados por un aguijón recto, fuerte, negro y muy punzan- te 3^ esparcidos sin orden por su superficie. Z . Clava her culis, L. Z. carih(Eum, Lam. Z. lanceolaUím, Poir. : C.T.V., 94-405. 3. Árbol bastante grande y que parece mucho al anterior, de ho- jas con 9-6 pares de hojuelas, lanceoladas, festoneado-aserradas, sub- sésiles, largas de 2" y anchas de 8"' y con una punta, de cara superior lampiña, mientras la inferior es pubescente solamente so- bre la costilla, provistas de muchos puntos transparentes y cuyo ra- quis es pubescentito é inerme; panojas terminales, pubescentes, abiertas y de 4-6" de diámetro; carpidlos solitarios por causa de aborto, globosos, sentados, tarde dehiscentes, insertos en un torus ó lecho diminuto de 1'" 1[2 de diámetro. Z. microcarpum , Gr. — Ár- bol como de 20' de altura, con aguijones cortos y subulados ó sin ellos, muy ramoso y de hojas con 6-2 pares de hojuelas, elípticas íi oblongas, festoneadas, con los festones anchamente truncos, peciote- das lampiñas y con puntitos transparentes muchos por la cara infe- rior, de los cuales una serie está entre los festones, largas de 1 l|2á2" sobre 8 á 10 de ancho y cuyo raquis es lampiño ; panojas terminales ó axilares, lampiñas, verrugosas, abiertas y de 3 á 8" de diámetro; 5 ovarios coherentes en el eje, carpidios cabizbajos, y por fin mas cortos que los carpóforos, distintos, diverjentes, mas gruesos por el vértice v lar"-os de 3-4'" ; endocariúo adherente con las valvas..^, aromaticum, W. Z. elejúantiasis, Macf. CLASE LI.— HESPERIDÍNEAS. Familia Ub. — AUJiANClACFAS ó IIEHPERÍDEA^. — Arbustos ó árl>oles bajitos, con ó sin espinas, cuyas hojas aunque })a- 272 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. rezcan simples son siempre compuestas, sea formadas de un peciolo alado, llevando por su ápice una sola hojuela mas ó menos grande y articulada con él, sea que tenga tres ó mayor número de hojuelas coriáceas, lustrosas y siempre provistas de muchas glándulas vejicu- lares y transparentes. Flores siempre hermafroditas, en grupos axi- lares ó en racimos terminales, las cuales constan de un cáliz mono- sépalo persistente, con o ó 3 dientes, de una corola con 5 ó á veces 3 pétalos, cuya base algo dilatada se inserta en derredor y un poco por debajo de un disco hipójino y junto con los estambres, cuyo nú- mero varia desde 10 hasta 20 y algunas veces mas, de filamentos libres, monadelfos ó poliadelfos : se observa alguna vez que otra un nectario en rededor de la base del ovario. Pistilo único formado de un ovario simple mas ó menos globoso, supero, sentado sobre el disco j plurilocular,mono ó pol^spermo, cuyo vértice lleva un estilo único, mas ó menos corto , bastante grueso y terminado por un estigma grueso, simple, discoideo y raras veces 3-5-lobo. El fruto es un hes- peridio ó una baya, cuyas semillas, de epispermo membranoso, con- tienen un embrión recto, y sin endospermo, cuyos cotiledones rec- tos siguen el eje de la radícula. Análisis dicotómica de las trihus. 1. Estambres siempre en número duplo de el de los pétalos, 2. — Estambres en número duplo ó múltiple de el de los pétalos, un hesperidio; algunos huevecillos dispuestos en dos hileras. Hojas uni- folioladas. T. I. Cíteeas. A. — 2. Ün huevecillo único ó dos cola- terales, una baya, hojas trifoliadas. T. II. Limóneas. Limonia trifoUata. — Dos óvulos sobrepuestos, una baya; hojas imparipi- nadas. T. III. Clausénieas. Murray a exótica, L. : C. T. Y. 304. A. CiTRUs, L. — 1. De hojas enteramente lampiñas, 2. — De ho- jas cuya cara inferior es pubescente, lijeramente provistas de glán- dulas; peciolo alado; fruto mayor ovoídeo-globoso, deprimido por el ápice, largo como de 5 á 'T" y ancho de 2 á 3", de color amarillo, claro ó verdoso : los vastagos tiernos son pubescentes. C. decumana, \u\ — Con las glándulas oleíferas, llanas ó cóncavas : de esa clase hav dos solas variedades : l^ Chadeo. C. cadeca mavor y C . cadeca menor, oue en Jamaica, Trinidad vías Antillas francesas se llama fruto prohibido. 2. Peciolo desnudo ó marjenado; fruto con un pezón, de sabor mu}' ácido y cuyo color es amarillo-pálido, llamado amarillo de limón. C. medica, L. : C. T. V., .301. — Hay bastantes variedades de esa especie, cuyas principales son : V. La del fruto ovoídeo-oblongo, tuberculado y lijeramente ácido. 2^ Fruto ovoideo, casi redondo, rugoso y muy ácido. C. limonium , Riss. Barladoro ó Mgueta. C. T. V., 584. 3*. Fruto ob-ovoídeo, con el estilo ordinariamente persis- tente, lijeramente ácido. C. peretta, Kííís. Peretta domi?igensis. — Perita de Sto Domingo. 4». Fruto bastante largo, ovoídeo-oblongo, tuberculado y con un pezón largo en el vértice , bien ácido. C. M. uilgaris. Limón francés. C. T. V., 583. — Peciolo alado; frutaglo- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LI. — HESPERIDÍNEAS. 273 boso sin pezón aliiuno. C. aurantium, L. : C. T. V., 585. — De esa especie hay muchas variedades : 1». Frutos muj gruesos de color anaranjado, con las glándulas oleíferas convexas: sabor muy dulce. C. paradisi, Mací. — 2^. Fruto bastante grueso, color anaranjado mas pálido, rugosito y con las glándulas oleíferas cóncavas : sabor amargo y ácido á la par. C. Mgaradia, Duh. : C.T. Y. 302. 3^. Fruto mucho mas pequeño y como de 1 1|2 á 1" de diámetro solamente, de color amarillo-pálido, liso y con las glándulas oleíferas cóncavas: de sabor mas ó menos dulce ; arbusto espinoso, con las hojas festonea- das. C. espinosíssima, Mey. C. lima, Macf. 4". La naranja agria, cuya cascara se llama de Curacao. (7. J.. -Z/íí^^íW'^. C. T. V., 587. 5^*. Las naranjas de China ó dulces, cuyas flores son muy estimadas V los frutos se confitan. C. sinensis. C. T. V., 588. Familia 116. — OLACINFAS. — Arboles ó arbustos con ó sin espinas, lampiños, de hojas alternas simples, enteras y sin estípu- las; flores pequeñas axilares, racimosas, corimbosas ó agrupadas, constando de un cáliz monosépalo, persistente y acrescente, mas ó menos trunco ó dentado; de una corola con 4-6 pétalos coriáceos, libres ó soldados entre sí por pares, con apéndices filiformes, de es- tivacion valvar, frecuentemente velludos interiormente ; estam- bres hipójinos ó epipétalos desde 3 á 5, de filamentos comprimido- subulados, con anteras acorazonado-oblongas, derechas ybiloculares; ovario simple, ordinariamente supero, unilocular ó dividido inte- riormente por un tejido que se halla entre los óvulos pocos ó uno solo, desnudo y colgando de la placenta central libre ó del vértice de la celda; estilo único. Drupa unilocular, monosperma, frecuente- mente ceñida la base por el cáliz crecido; semilla pendiente, con embrión basilar, ovoideo, ordinariamente diminuto y situado en el ápice de un endospermo carnoso, con los cotiledones adherentes y de raicilla dirijida al hilo. XíMENiA americana, L. C. T. V., 514. — Ximenia montana. Tigrito, Ceas, cuyos frutos amarillos, esféricos, del tamaño de una ciruela pequeña, con poca carne, como línea y media de espesor, y una semilla también esférica y bastante gruesa, algo oleajinosa. Maduros y recien cojidos exhalan un olor prúsico muy fuerte y tienen el sabor de almendras amargas tan pronunciado que no se podría co- mer si no fuera muy peligroso hacerlo; después de seca la pulpa y á medida que se va pasando el olor va disminuyendo, hasta desapa- recer del todo, hasta en la semilla. Ningún animal se lo come y es tenido con mucha razón como venenoso. Familia 111.— MELIACEAS ó TEIQUILlACFAS. — Av- bustos ó árboles mas ó menos altos, corpulentos y frondosos, cuyas hojas son compuestas; parió imparipinadas y alternas, rarísimas veces simples ; de flores siempre hermafroditas, ora en racimos, en espigas ó en panojas y tan pronto axilares como terminales, que constan de un cáliz monosépalo con 4-5 divisiones mas ó menos pro- fundas y que á veces están remplazadas por igual número de dien- tes; de una corola con 4-5 pétalos valvares y mas veces abiertos; estambres 8-10 hipójinos y monadelfos, de modo que sus filamentos soldados entre sí forman un tubo cuyo vértice 8-10-fido lleva las TOMO II 18 274 DIVISIÓN SE(.TÜNDA. FANERÓGAMOS. anteras pegadas en él de varios modos, ora por su ápice, ora por su superficie interior y ordinariamente sentados. Pistilo formado de un ovario único sentado sobre el disco anular, de donde galen los estambres, con 3-4-5 celdillas, conteniendo de ordinario dos óvulos, á veces 1 y mas rara vez 4 ; en el primer caso son colaterales y so- brepuestos, de su vértice sale un estilo simple mas ó menos largo, terminado por un estigma cabezudito ó con 3 ó mas dientecitos. El fruto consiste en una especie de cápsula con 3-5 celdas, abrién- dose por tantas ventallas y con 3 semillas provistas de un arillo membranoso, alguna vez que otra eá drupáceo }' consiste en una es- pecie de drupa ó de nuez, cuyo hueso asurcado tiene 5 celdas mo- nospermas por causa de aborto; embrión de cotiledones rectos y según el eje de la radícula sobresalientes y foliáceos, alojado en un endospermo delgado ó carnosito que suele faltar bastantes veces. Tribu l'^. — Melieas. — Embrión provisto de un endospermo y cuvos cotiledones son foliáceos ; ovario de celdillas bi-ovuladas. ^íe- lia sempervirens, Sw. : C. T. V., 333-836. Tribu 2. — Triquílieas. — Embrión sin endospermo, cu3^os coti- ledones son espesos ; ovario con 1-2 y raras veces hasta 4 óvulos. G. I. Trichilia, L. — Hojas con 5 pares de hojuelas elípticas ú oblongo-lanceoladas, lampiñas, enteras, aguzadas por la base y de las cuales las mas inferiores sonmenores, largas de 2 ll2'S 3, 4" sobre 1 l|2á 2" de ancho, panojas pubescentitas 2-4 veces mas cortas que las hojas, largas de cuyos brazos llevan pocas flores ó una sola, blancuz- cas, con los pétalos lampiños y largos de 2'"; estambres de 8 á 12"' con los filamentos reunidos por la base 3^ formando así un tubo corto, peludo interiormente, anteras 10 y peludas ; árbol bajito muy ramoso. T. Jiirta, L. T. spondioides, Jacq. — Hojas largas de 6 á 7 y con 7-10 pares de hojuelas aovad o-oblongas, oblicuas por la base, redon- deadas V con una punta obtusa por el vértice, lampiñas v largas de 3 li2-4-4" li2 sobre 1 lt2-2-2" li2 de ancho, con el peciolo de V" ; inequiláteras por la base, cuyo lado superior redondeado es maj^or que el inferior, que es aguzado 3^ como huyente; las inferiores son menores; panojas pubescentitas 4 veces mas cortas que las hojas y cuyos brazos llevan 3-11 flores verdoso-amarillas, con los pétalos largos de V" ; filamentos reunidos solamente por 1{3 y por fin sepa- rados; anteras lOypeludas; cápsula sub-globosa de 5-6"' de diáme- tro, tomentosa y rugosa, cuyas semillas ovoideas son envueltas en un arillo colorado. Árbol no muy ramoso, pero cuyos ramos son es- tendidos y bastante largos, que se eleva á 15-20'. T. spoudioides, Sw., Jacq., A. Jus. G. II. Gaurea, L. — Pétalos y ovarios lampiños ; árbol bajito y ramoso, cuyas hojas largas de 4 á 7" tienen 2-8 pares de hojue- las elípticas ó eliptical-oblpngas, lampiñas, con 8-10 nervaduras pronunciadas por cada cara, cuyas axilas son barbudas en la infe- rior; flores blancas, de cáliz sub-entero, con dientecitos distantes, pétalos largos de 2'" li2; cápsula sub-globosa y asurcada. G. S'warl- m, De. Gr. vahliana, Juss. — Pétalos v ovarios tomentosos :arbüsto como de 15' de altura, cuyas hojas largas de 8 á 12" tienen 4-12 ho- juelas oblongas . lampiñas, con 12-15 nervaduras, sobresalientes DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LI. — HESPERIDÍNEAS. 2*75 por ambas caras, de a^las lamx^iñas v largas de6"-8"-9 lj2" sobre 2, 4 1|2 de ancho, con una punta obtusa, casi alternas, con el peciolo largo de 1{2'"; flores en espigas arracimadas, largas de 6 l|2-9 1|2- 16", formadas de espiguitas largas de 12-18"' ó de grupitos y hasta de algunas solitarias, de cáliz sub -entero, 4-lobo y de pétalos largos de 2-3'"; cápsula piriforme j globosa á la par, sub-asurcada, ater- ciopeladita, larga como de 8"' sobre 6'" de ancho, cuyo pedúnculo largo de lj2"', es tan o-rueso como su base aguzada. G. perottü, A. Juss. C. tricJiüoides, Pl. C. T. V., 496. G. III. MoscHEOXYLUM Sicartzü, Juss., etc. : C. T. V., 763. G. IV. Carapa guianensis, Aubl. : C. T. Y., 808. G. V. PoRTESiA Gvata, Cav. Trie Jiüia pálida, Sw. T. odorata^ Andr. T. moscJiata, Macf. , ^ Familia 11%. — CE DRE LACE AS. — ^e diferencia de la ante- rior, de la cual era una tril)U, y con la que tiene major analojía, por estar sus estambres algunas yeces distintos, pero mas ordinaria- mente monadelfos ; por su ovario 4-locular con lo menos 4 ó muchos óyulos en cada celda; fruto capsular de pericarpio leñoso, cuyas ventallas se desprenden de los tabiques, ora por el vértice, ora por la base, quedándose las semillas pegadas en dos series en el eje per- sistente ; tales semillas, ordinariamente empizarradas, son aladas, con ó sin endospermo. Arboles mayores muy corpulentos y muy frondosos, cuyas grandes y elegantes hojas pinadas son provistas de glándulas ó puntos transparentes. G.I.SwEiTENiAMS'.5e?i^^r¿/dwm,Desc.:C.T.V.102-*62 G.II. Cedrela odor ata, L. : C. T.Y., 102. Familia \Y^.— ERITROXILEAS. — Arbustos ó árboles ba- jitos, muy ramosos, con hojas simples, opuestas ó alternas, peciola- das, ordinariamente pequeñas, lampiñas, lustrosas, bien enteras, pecioladas, de cara inferior areolada ó venosa, deciduas y acompa- ñadas de estípulas pequeñas y agudas; flores pequeñas blanquecinas ó amarillo-verdosas, apareadas ó amanojadas, raras veces solitarias y de ordinario axilares, las cuales se componen de un cáliz con 5 sépalos persistentes, los cuales, mas ó menos soldados entre sí, lo hacen redondo y monosépalo; de una corola con 5 pétalos de base algo mas ancha, iguales, provistos interiormente y por la base de una escama doble, .y cuya estivacion es empizarrada: estambres 10 monadelfos, con anteras introrsas. biloculares y lonjitudinalmente dehiscentes. Pistilo formado de un ovario simple 1-3-locular por causa de aborto, con un huevecillo único colgante, de cuyo vértice salen 3 estilos, á veces soldados entre sí por la base, estigma cabe- zudo. El fruto es una drupita monosperma, de semilla angulosa, cuyo embrión recto y alojado en el eje de un endospermo córneo tiene los cotiledones lineares, planos y foliáceos; de radícula superior. Ervthroxylum, L. — 1. Flores ó pedicelos de ordinario solitarios, 2, — Flores ó pedicelos nunca jamas solitarios. 4. 2. Siempre solitarios; ramos siempre inermes, 3. — Mas veces solitarios, mellizos aveces; ramos siempre espinosos; arbusto ramo- sísimo como de 3 á 5' de alto, cuyos ramos divaricados, alternos, cortos y de ápice espinoso, llevan hojas obovales, obtusas, cortísi- 276 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. mámente peciolaclas y de cara inferior mas páiiida que la superior j reticulado-A^enosa; pedicelos 2 veces mas largos que las flores que llevan ; fruto trígono, con tres estrias mas pronunciadas que las de- mas. E. spinescens, A. Rich. — Arbusto de 4 á 6' de altura, con ra- mos alternos, frájiles, en forma de varita, rugositos, aleonadito- lampiños , cuyos mas tiernos tienen las estípulas disticamente embricadas ; hojas cortísimamente pecioladas, aproximadas, ob- aovado-elípticas, redondeadas por el ápice, algo mucronaditas, agu- zadas por la base, entejérrimas, reticulado-venosas, membranosas, lampiñas y cuya cara inferior es un poco glauca, largas de 12-15'", y anchas de 7-8'" 1[2, con peciolo acanalado, apenas largo de V", acompañado de estípulas axilares, solitarias, aovadas, agudas y casi igualando el peciolo. Flores solitarias, mellizas ó á veces algunas agrupadas juntamente, con los pétalos oblongos, obtusos, cuya base dilatada está provista por el centro é interiormente de una escama bíloba y derecha, lampiños, blancos y 3 veces mas largos que el cá- liz ; drupa aovada, cilindrica v roja. -É'. hondense, Kth. ^. coca, C. T. V.,261. 3. "Arbusto muy ramoso como de 5 á 7' de altura, con. hojas pe- queñas, ob-aovadas, redondeadas ó escotadas por el vértice, mem- branosas, largas de 12 á 6'" sobre 8-4'" de ancho, y con el peciolo de 2-1'" ll2y mucho mas largo que las estípulas, nunca reticulado- venosas y de cara inferior glauca y lilanquecina ; pedicelos apenas mas largos que las flores ; drupa colorada, elipsoídeo-oblonga y del largo del pedicelo. E . brevijJes, De. 4. Pedicelos fasciculados siempre, 5. — Pedicelos nunca fascicu- lados y en número de 2-3, mas cortos que el peciolo, de cuya axila salen; árbol bajito y muy ramoso, con hojas elípticas, lanceoladas, obtusamente aguzadas, ó con una punta, coriáceas, largas de 3 1|2~ 2'" 1]2 sobre 1"' 1^2 de ancho y de cara inferior verde, cuyo peciolo largo de 3'" es acompañado de estípulas aovadas ; ramitas florí- feras provistas de escamitas dísticas, cortitas, persistentes y bien distintas, con pedicelos mas largos que los peciolos y sosteniendo flores mayores que las demás especies, cuyos pétalos son largos de 3-2"'; fruto oblongo, obtusito por el vértice, sub-exágono y tan lar- go como el pedicelo. E. squamatum,N . E. liatanense, Rich. 5. Hojas mas ó menos reticuladas, cuyas venas son conspicuas ó bien visibles y bastante pronunciadas, 6. — Hojas no areoladas y cuyas venas son casi inconspícuas ; arbusto ramoso como de 8 á 10' de alto, con hojas aovado-oblongas ú ob-aovadas, redondeadas ó sub-escotadas por el vértice, membranosas, tiesecitas y de cara in- ferior glauco-blancuzca, largas de 2-1" sobre 12-10'" de ancho y cuyo peciolo largo de 4-2"' es acompañado de estípulas subuladas; pedí- celos mas cortos que el peciolo; drupa oblonga, obtusa por ambos estremos, prismática y larga de 3 á 4"'. E . ohovatum, Macf. E. af- fine, Rich. 6. Venas conspicuas reticuladas por ambas caras, 7. — Areoladas solamente por la cara inferior, cuya redecilla es formada por un par de nervaduras que van juntándose mutuamente para encerrar espacios lanceolados en el centro de la superficie de la cara. Arbusto DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LII. — ESCULÍNEAS. 2*77 de 10 á 16' de altura, volviéndose á veces árbol bajito, con hojas ob-aovadas ú ob-aovado-oblonpas, redondeadas ó escotadas por el vértice, membranosas, de cara inferior un poco glauca, largas de 1" sobre 1" de ancho, cuyo peciolo, acompañado de estípulas triangu- lares, es largo de 2-3'" ; ñores blancas, fragrantés j precoces, cuyos pedicelos laterales son tan largos como el peciolo y el fruto que es oblongo, encarnado, obtuso por ambos estremos, desigualmente an- guloso, y largo de 3-4'". B. areolatícm, L. : C.T. V. 261. 7. Arbusto de 10 á 15' de altura, que bastantes veces se vuelve árbol bajito, con hojas ob-aovadas ú ovales, redondeadas por el vér- tice, membranosas y de cara inferior algo glauca, largas de 2-1" 1|2 sobre l"-8"' de ancho, á cuyo peciolo largo de 2-3'" acompañan estí- pulas subuladas; flores precoces cuyos pedicelos filiformes son mas largos que los peciolos y dos veces mas que el fruto elipsoídeo- oblongo, con ángulos desiguales y obtusos, largo de 3-2'". B. ohtic- sum,J)c.F. Havanense , Kth.^. areolatum ,Vce-p^. E. ovatum^ Cav. CLASE LII. — ESCULÍNEAS. Familia 120. — MALPIJllCEAS. — Vejetales fruticosos ó frútices, sarmentosos, abejucados y leñosos, arbustos y árboles bas- tantes veces altos y corpulentos, con hojas simples, coriáceas, lam- piñas ó pubescentes y cuya cara inferior está algunas veces provista de pelos, cuya picadura abrasa mucho, masó menos cortamente pe- cioladas, bien enteras y de ordinario opuestas ; dos estípulas acom- pañan frecuentemente á la inserción del peciolo, frecuentemente caducas. Flores siempre hermafroditas y dispuestas en racimos ó en espigas, raras veces en panojas axilares ó terminales, cuyos pedice- los, ordinariamente articulados, llevan dos bracteitas situadas por su medio y unifloros; se componen de un cáliz monosépalo, con 5 divisiones mas ó menos profundas y de estivacion valvar, reempla- zadas algunas veces por tantos dientes, de las cuales 4 llevan dos glándulas situadas esteriormente por la base. Corola con 5 pétalos mas ó menos unguiculados, alternos con las divisiones calizinales, pero que algunas veces suelen faltar; estambres 10 ó menor número por aborto, libres y distintos ó cuyos filamentos están á veces reu- nidos por la base, de anteras adheridas. Pistilo formado de un ova rio único, supero, con 2-3-5 celdas uniovuladas, con el óvulo licó- tropo ó ascendente, aunque sostenido por un funículo colgante; de su vértice salen 3 á 4 samaras soldadas entre sí por la base : otras veces es una drupa ó un noculanio, conteniendo tres huesecitos mo- nospermos, cuyas semillas son formadas después del tegumento pro- pio de un embrión algo encorvado y sin endospermo. Análisis dicotómica de las tríhis, 1. Fruto seco formado de carpidlos alados, 2. — Fruto siempre drupáceo, mas ó menos carnoso é indehiscente; estilos 3, libres ó reunidos, estambres 10. T. I. Malpliieas. A. 278 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 2- Estambres 10 ó menos por aborto, estilos 3 ó tantos cuantos carpelos hay, libres ; carpidlos samaroídeos , secos é indebiscentes monospermos, con una ala ó cresta dorsal é insertos en un torus piramidal; hojas opuestas, raras veces verticiladas, frútices ó ar- bustos sarmentosos ó abejucados. T. II. Banistérieas, ■ — I. Stigma'jjliyllGii perijüocifolnim , Juss. — II. Banisteria peH])Jocifo- lia. — ÍII. Iíej)teropteris purpurea, Kth. B. purpurea, L. — Es- tambres de ordinario 10; estilos 3 reunidos ó uno único, carpillos secos formando el fruto, indehiscentes monospermos j cuyas alas principales son laterales, insertos ellos en un torus piramidal; frú- tices ó arbustos de ordinario sarmentosos ó abejucados, con hojas opuestas ó verticiladas. T. III. Hireáceas. — I. Triopteris ovata, Cav. T. Jarjiaiceiisis, Sw. Maipiglúa pcmiculata , Mili. — II. Hiraa jussicsana, Miq. — III. Telro/pteris inequalis, Cav. T. citrífoUa, De. IV. Hiroia ridleyana, Juss. A.G. I. Byrsónima, Rich. — 1. Hojas de cara superior lampiña v lustrosa, mientras la inferior es mas ó menos tomentosa, 3. — Ho- jas enteramente lampiñas, 2. , 2. Árbol de 20 y 30' y mas de altura, bastante coposo v corpu- lento, con hojas elípticas ó eliptical-oblongas, pecioladas; algunas veces las nervaduras de la cara inferior son alampiñadas ó de color verde-pálido, largas de 4-3" y anchas de \" 1|2, de ordinario con una punta; brácteas aguzadas ó subuladas y sub-iguales; flores amarillo de oro en racimos, cuyos pedúnculos y brazos, así como los peciolos, son tomentosos y color de orin ; celdillas de las anteras lampiñas é igualando el conectivo, ovario sedoso lanujinoso ; drupa amarilla. 5. coriácea^ J)q. B. herteroana, Zu^&. 2Ialpigliia coriácea, Sw. : C. T. Y., 100. — Arbusto ó árbol bajito, con hojas espatula- das, aguzándose por la base hasta volverse peciolo corto, de márjen arrollada, cu^'as venas son inconspícuas, redondeadas ú obtusitas por el vértice, largas de 1 1|2-1" sobre 8-5'" de ancho, de cara su- perior lustrosa, mientras la inferior se queda opaca. Flores al prin- cipio color de ro^a y volviéndose mas tarde purpurinas, en racimos cortos pubescentitos ó lampiños, con brácteas lanceoladas y aguza- das, cuya inferior es dos veces mas larga que las laterales; celdillas de las anteras lampiñas y un poco mas cortas que el conectivo; ova- ]*io lampiño; drupa verdosa. B. lucida, Rich. Malpigliia lucida, MuU. 3. Cara inferior tomentosa ó alampiñada, 4. — Cara inferior siempre tomentosa: árbol mediano, de hojas eliptical-oblongas 6 elípticas?, acuñadas por la base, largamente pecioladas, largas de 4-3" y anchas de 2-1", pelo de la cara inferior persistente, aleonado- pálido : flores amarillas en racimos largo-tomentosos, color de orin, con brácteas pequeñas, triangulares é iguales ; celdillas de las ante- ras peludas é igualando el conectivo; ovario velludo. B. cinérea. De. B. crassifolia, Sun. 4. Opaca y color de orin : árbol que se eleva como á 30 y 40' de altura, bastante corpulento y coposo, con hojas elíptico-lanceoladas ó lanceoladas, aguzándose por la base hasta volverse peciolo corto, largas de 5-2" y anchas de 20-8'": de vértice aguzado y con una DICOTILEDÓNEOS, — CLASE LII. — ESCULÍNEAS. 279 punta obtusa; flores amarillas en espigas ó racimos simples, con bracteas lanceoladas, obtusas é iguales; celdillas de las anteras lam- piñas, igualando el conectivo y cujo ápice es separado y algo recor- vado; ovario lampiño y drupa^amarilla. B.spicata,WiQ\i. : C.T.Y. 99. — Opaca pero jamás color de orin, pero con vellito aleonado; ar- busto de 10 á 25' de alto ó árbol bajito con hojas ovales ó eliptical- oblongas, largamente pecioladas, largas de 5-3" y anchas de 1"-1 1|2 con la cara superior venosa ; flores amarillas en racimos, cuyas brac- teas pequeñas son iguales y triangulares; pedicelos casi dos veces tan largos como las flores; celdillas de las anteras velludas y un poco mas cortas que el conectivo: ovario lampiño. B. crasifoUa, Kth • C. T,V.,100. G.II.Malpighia, L. — 1. Hojas bienenteras; 2. — Hojas dentadas; arbusto rastrero por la superficie del suelo, ramoso y con hojas re- dondeadito-oblongas ú ovales, sinuado-dentadas, lampiñas, cuj'os dientes apartados son espinosos, redondeadas por ambos estremos, pero á veces escotadotricuspidadas, largas de 6'" y anchas de 5-4"'; umbelas con 1-2 flores sentadas y mas largas que las hojas; cáliz con 6 glándulas; drupas sub-giobosa^y con 3 surcos. M. coccigera, L. 2. Enteramente lampiñas porque se desprende temprano el poco pelo bi-cuspidado que tienen cuando tiernas, 3. — Con la cara infe- rior cubierta de pelo bi-cuspidado, persistente, 4. 3. Árbol mediano con hojas aovadas, ordinariamente con una punta obtusita, ó de repente aguzadas, raramente obtusas, largas de 4-3 l|2-2" sobre 2 l|2-2-r' 1(2 de ancho ; flores purpurinas en umbelas 3-5-7-floras, pedunculadas, de cáliz con 6-8 glándulas, drupa sub-globosa apenas asurcada, con los huesecitos obtusamente 4-angulosos, con estrias en el dorso, los lados y la cara interna, cuyos instersticios son transversalmente rugosos ó tuberculados. M. gla- ira.lj. M. nítida, Mili. 3Í. u/idtdata, Juss.C. T. V., 594. — Árbol pequeño que se eleva como á unos 12 á 15' de altura, muy coposo, con hojas elípticas, de ordinario obtusas, largas de 2 l\2-2" y anchas de 12[3-r' 1[4, una ó dos flores rosadas axilares, con pedicelos largos de 1" 1[3, ó sentaditas, de cáliz con 6 glándulas; drupas sub-globosas, apenas asurcaditas, rojo-negruzcas cuando enteramente maduras, con los huesecitos 4-angulosos, transversalmente rugosos ó tuber- culados por los lados. M. pimici/oüa, L. : C. T. Y. 593. ■í. Arbusto recto no muy ramoso, alto de 6 á 8', con hojas elípti- cas ú oblongas, coriáceas, cortamente pecioladas, con una punta ú obtusitas, ordinariamente largas de 4 á 3'" y anchas como de 2"- 1 lf2-8"' : flores blancas teñidas de rosado, en umbelas 3-5-floras, pedunculadas ó subsesiles, de cáliz con 8-10 glándulas; drupa glo- bosa, lisa ó algo asurcada, purpurina y como de 6'" de diámetro. M. icrefis, L. : C. T. V., 582. — Con dos variedades : 1^ De hojas elíp- ticas ú oblongas; cáliz con 10 glándulas. M. iirens, Juss. : 2^. De ho- jas lanceoladas; cáliz con 8 glándulas, pétalos no simétricos. M. íirens, Juss. M. lanceolata, Gr. Familia 121. — SAPINDACEAS. — Plantas herbáceas mas ó menos trepadoras, frútices ó bejucos, arbustos mas ó menos sarmen- tosos y árboles bastantes veces corpulentos; frondosos y muy altos, 280 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. con hojas compuestas y alternas; flores polígamas ó á veces uni- sexuales por aborto , pero de ordinario hermafroditas, pequeñas, blanquecinas j dispuestas en racimos ó en panojas, se componen de un cáliz con 3-4-5 sépalos ordinariamente distintos ó algo soldados por la base y de prefloraeion empizarrada, de una corola, con 4-5 pétalos, frecuentemente provistos en el interior de una escama y se- parados de los estambres por el disco ó por glándulas, suelen faltar algunas veces; estambres ordinariamente 8, ó en menor número por causa de aborto, comunmente escéntricos ó unilaterales, con fila- mentos filiformes, subulados, libres y distintos ó reunidos por la base y llevan anteras introrsas, biloculares y lonjitudinalmente de- hiscentes. Pistilo simple formado de un ovario redondeado, 2-3-4- locular, con celdas 1-2-3 ovuladas, cuyo óvulo solitario es ordina- riamente erguido; del vértice sale un estilo simple 3 ó 4-bífido. Fruto abayado, como drupáceo ó capsular, dehiscente, bi-3-4-locu- lar ; otras veces es samaroídeo y con alas, casi siempre indehiscente; semillas globosas ó comprimidas, ordinariamente solitarias en las celdas, derechas ó ascendentes y raras veces pendientes, por lo co- mún provistas de un arillo mas ó menos desarrollado, con un em- brión corvo, de cotiledones incumbentes, cuya raicilla corta está de ordinario dirijida hacia el hilo sin endospermo. Análisis dicot árnica de las trihts. 1. Pétalos provistos de una escama ó apéndice petaloídeo situado en cada uña ó por la base, 2. — Pétalos barbudos interiormente, glandulosos ó desnudos pero sin apéndices lejítimos. Disco anular ó raras veces glándulas unidas, por la base y formando un anillo que se halla entre los pétalos y los estambres. Ovario solitario bi ó tri- locular con celdas monospermas ; árboles y arbustos no trepadores. T. I. Saptndeas. a. 2. Pétalos interiormente apendiculados con una lámina petaloídea en cada uña; glándulas separadas, situadas entre los pétalos y los estambres; ovario trilocular con celdas monospermas; yerbas ó ar- bustos trepadores y zarcillosos ó bejucos. T. II. Pauliniea.s. B. — Pétalos algo escamosos por la base ó con mayor frecuencia nulos ; ovario tri ó raras veces bilocular , con celdas que contienen dos óvulos cuyo superior es erguido, mientras el inferior es pendiente; estambres insertos en el disco hipójino; pericarpio vesicular ó sa- maroídeo ; embrión espiralmente retorcido con los cotiledones in- cumbentes. Arbustos no trepadores con hojas simples ó compuestas. T. III. Dodoneáceas. C. A.G. I.Sapindus, L. — Hojas con 4-5 pares de hojuelas desigua- les, oblongo-lanceoladas ó elípticas, de cara inferior tomentosa, largas de 3-3" 1|2 las superiores, mientras las inferiores lo son de 1 1|2 á 2", anchas las unas y las otras de 1 1|2 á '2" y casi sentadas, con el raquis anchamente alado j largo de 9-10-11"; panojas pubes- centes ; carpidlo globoso amarillento sucio ó lijeramente pardusco. >S'. saponaria. C. T. V., 375. — Hojas con 1-3-5 pares de hojuelas, DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LIl. — ESCULÍNEAS. 281 oblongo-laiiceoladas, inequilaterales, con el lado superior redon- deándose desde la base y algo arqueado, mientias el inferior, mas estrecho, es casi recto , aguzadas por el vértice ó curas mas infe- riores son elípticas y lampiñas, desiguales y largas de 3 1|2, 4 1^2 5-6" y anchas de 1 1|2 á 1", con el peciolo como de V"; raquis mar- jenado ó desnudo y largo de 8-10-11", acanalado; panojas pubes- centes, pétalos pestañosos, con una escamita diminuta, carpidio globoso, ordinariamente solitario por aborto, lustroso, blanco-ama- rillento sucio ó algo bruno, de 8"' de diámetro. S. iíiaqiialis, De. /S. saponaria, Rich. S. forsijiJín, De. G. II. Meltcocca, L. Árbol alto de 40 á 50', bien frondoso y bas- tante corpulento, de hojas con dos pares de hojuelas elípticas ó elíptico-lanceoladas, bien enteras y lampiñas, panojas terminales; baya casi globosa ú ovoidea. M. lijuga, L.: C. T. V., 596. — Árbol algo mas bajito que el precedente, muy frondoso, cuyos ramos cilindricos y en ramitas, lisos y lampiños llevan hojas paripinadas y formadas de dos pares de hojuelas pecioladas opuestas, elípticas puntiagudas, y aguzadas por la base, integérrimas , reticulado- venosas , con las nervaduras y las costillas muy preeminentes , coriáceas, lampiñas, algo glaucas, de cara superior lustrosita, mientras la inferior mas pálida es enteramente opaca, las superiores son largas de 6" y anchas de 3", mientras las inferiores lo son sola- mente 4"-4 1|2, con el raquis estriado, lampiño y largo de 2 li2-3". Fruto elíptico-mucronado con el estilo persistente y largo de 9"'; de semilla aovado-elíptica. M. oluceformis, Kth. C. T. V., 597. G. III. Blighia sápida, Koen. Ahecsia africana, Tuss. Kth. Cupa- nia sápida, Cumb. C. T. V., 218. — G. IV. Cupania glo.ira, Hook. C. T. V., 104. — G. V. Schmidelia cominia, Sw. — G. VI. Hipelate paniculata, Camb. Melicocca paniculata. Juss. — G. VII. Euplioria pv/iiicea. C T. V,, 595. B. G. I. Serjania, Kth. 1. Hojas biternadas provistas de líneas ó puntos transparentes, 2.— Hojas sin líneas ni puntos transparentes, biternadas, con hojuelas lineares, entegérrimas y agudas, con los pe- ciolos alados. Flores muchas en racimos axilares, frecuentemente con 2 ó 3 brazos desnudos por la base, provistos los racimos de dos zarcillos opuestos situados en el punto en donde principian á rami- ficarse, alternas, pequeñas y poco pediceladas, blanquecinas; cáp- sula colorada trílolm, con tantas alas cuantos lóbulos hay y situadas por súbase, membranosas y transparentes. 8. angustifolia, W. 2. Ramitas pubescentitas, hojuelas ovales, aserradas, lampiñas, de cara superior lustrosa, mientras la inferior opaca tiene pelo dis- puesto por grupitos en la axila de las venas, largas de 1-2" ; raquis desnudo trígono; samaras pubescentitas superiormente, ala semi- obaovado-oblonga, enteramente inferior y no estendiéndose sobre el dorso de la celdilla que es algo venosa; samara larga de 8"' y tan ancha por abajo, mientras que por el vértice lo es solamente de 4- 5"'. S. paniculata, Kth. S. eqnestris , Macf. — Ramitas pubescen- titas ó alampiñadas; hojuelas elípticas, sub-enteras, lampiñas, lar- gas de 3-6", algunas de ellas suelen abortar, cuyo raquis desnudo está á veces con una márjen estrecha; flores en racimos largos 282 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. formando panojas flojas ; ala semi-ob-acorazonada , enteramente inferior y no prolongándose sobre el dorso de la celdilla lisa, samara larga de 8'" y ancha de 6-8'" por abajo j de 4'" por arriba. S. diva- oicata, Sw. Pmillinia divaricata, Sw. G. II. PA.ULLINIA, L. 1. Hojas de 3 en rama ó dos veces trifoliadas, 2. — Hojas imparipinadas, sin pimtitos, con dos pares de hojuelas lampiñas, aovado-oblongas, ú oblongo-lanceoladas, con dientes dis- tantes ó bien pronunciados, largas de 3-6" con el raquis alado por la base ; racimos del largo de las hojas ó mas corto que ellas ; cáp- sula piriforme sin alas. P. ¿nnnata, L. F. div erri folia . P, Hostma- ni, Steud, C. T. Y., 563. 2. Hojas dos veces de 3 en rama ó biternadas, 3. — Hojas de 3, en rama, con las hojuelas sub-oblongas, sub-aguzadas, casi elípticas y á veces como aovadas, festoneado-aserraditas por el vértice, lampi- ñas, cortamente pecioladas, reticulado-venosas, membranosas, lar- gas de 2" l{2-2 l\2" j anchas de 16-20"', la del medio aovado- oblonga es cuneiforme por la base j larga de 2 l{4-3", con el raquis lampiño, largo de 2 l|4á 3" y cuja ala integérrima es apenas ancha de V" j evanecente por la base. Cada racimo madura solamente 2 ó 3 frutos cortamente pedicelados, oblicuos, trígonos, largos de 8-9'", con 3 celdas monospermas por causa de aborto; racimos largos co- mo de 2"-2, ll2y cortamente pedicelados, simples y con muchas flo- res casi sésiles; ramitas angulosas, lampiñas y color aleonado. P. cucuTU. C. T. V., 564. 3. Provistas de puntitos transparentes dispuestos por series, de hojuelas romboideas ó eliptical-oblongas, con dientes distantes, grandes, obtusos y situados por arriba del medio, lampiñas, mem- branosas y largas de 1 l{2-4" ; raquis con una ala estrecha que falta por debajo de las divisiones; cápsula sin alas, piriforme, lampiña, cuya parte superior es sub-globosa, apenas 3-asurcada y aguzán- dose de repente para cojer el carpóforo, larga de 5-6'" y ancha de 4"' superiormente, cilindrica y de 1|2'" de diámetro por la base, con celdillas hemisférico-convexas, cuyas semillas globosas son cu- biertas mas allá de la mitad por un arillo bruno v bi-üartido. P, curasavica, Jacq. P. Jamaicensis, Macf. G. III. ÜRViLEA 5míí;¿¿í, Gr.: C. T.V., 376. G.IV. CardiospermuMjL. Pétalos superiores espatulados,4 veces tan largos como los sépalos esteriores; cápsula sub-globosa, grande y redondeada por el vértice. Planta herbácea anual trepadora, muy ramosa, que se eleva á 5 ó 6' y mas de altura, pubescente ó alam- piñada, con las hojas bi-ternadas, partidas y obtusamente aserra-^ das, cuya terminal es con una punta; glándulas del disco redondea- ditas ; pétalos largos de 2 á 3"', cápsulas largas de 1", pubescente ó alampiñada. C. lialicacahim, L., etc.: C.T.V.379. — Pétalos supe- riores largos de 1 I|2-r" ob-aovados y 3 veces tan largos como los sépalos esteriores; cápsula turbinado-redondeadita, pequeña, trian- gular, deprimida por el vértice y larga de 4'" y tan ancha. Planta herbácea anual trepadora, ramosísima y que se eleva á 6-8' con hojuelas bi-ternadas, picadas y obtusamente aserradas, cuya termi- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LIU. " — CELASTROÍDEAS. 283 Bal es aguzada; glándulas del disco redondeaditas. C. microcarp^'An , Ktli, C. acwíjiinatiim, Miq. C. DoDONCEA, Hojas ob-aovado-lanceoladas ú ob-lanceoladas, anchas de 2"-6"'-18"'" y largas de 5' -4" li2-3'", cápsula alada, re- dondeadita, mas larga que el pedicelo, de 10-12"' de diámetro, ceñida por la ala, cuya anchura es casi igual por la ])ase, y con- tigua por el vértice, con el seno terminal cerrado. D. i'iscosa, L. J). canclolleaim, B\. D. arahica, Hook. — Hojas linear-lanceoladas, anchasde 8-5*'' y largas de 6-5-3"'; cápsula alada redondeadita tan larga como el pedicelo y ancha de 5-6'", cuya ala ciñe la celda, mas ancha por arriba que hacia la base ; seno terminal abierto, 3-an- gular. 1). o/iigustifoUa. Sw. D. Mcdata, Kth. B. linecms, E. Mey. DIVISIÓN II. — PERÍJINOS. S^ECGIÓN ÍI. — PEUIJINOS. CLASE Lili. —CELASTROÍDEAS. Famüia 122.— VINÍFERAS ó AMPBIÍDF AS. — Vl&nias bemi-leñosas ó bejucos, otras veces arbustos sarmentosos y provis- tos los unos y los otros de zarcillos opuestos á las hojas, que son sencillas, enteras, mas ó menos lobadas, á veces digitadas y por con- siguiente compuestas ó pinadas, largamente pecioladas, alternas y con dos estípulas caducas acompañando la inserción del peciolo. Flores pequeñas dispuestas en racimos y en cimas ó corimbos opuestos á las hojas, hermafroditas y formadas de un cáliz monosé- paio entero ó con 4-5 dientecitos, de una corola con 4-5 pétalos in- sertos por el lado interior de un disco hipójino, caducos, ya libres y sueltos, ya adherentes entre sí por el vértice, formando así una es- pecie de bóveda que se desprende desde la base y se cae de una sola pieza á manera de caperuza; los estambres son 4-5 hipójinos , opues- tos á los pétalos, cuyos filamentos libres ó soldados entre í>í llevan anteras oscilantes. Pistilo simple formado de un ovario único, glo- boso, sentado sobre el disco anular, de contorno lobado que envuelve su base, 2-locular, con 1-2 óvulos en cada celda, y cuyo ápice so- brelleva un estilo corto, grueso, que suele faltar algunas veces y que se termina por un estigma bílobo. Fruto abayado y globoso con 1-2 celdillas mono ó polispermas, con semillas huesosas pegadas á un eje central derecho, compuestas de un epispermo espeso, y de un embrión derecho y situado hacia la base de un endospermo córneo. G. I.Cissus, L. 1. Hojas compuestas y de tres en rama o trifolia- das, 2. — Hojas simples mas ó menos grandes, bastante dobles, acorazonado-oblongas, acorazonadas ó aovadas, lampiñas ó algunas veces pubescentitas, con los dientes aserrados, setáceas, distantes ó aproximadas, largas de 2-3-4"', sin contar el peciolo que lo es de 1- F' 1^2, sobre 1 1[2, 2 \\2 de ancho. Brazos de la umbela general simplemente bi ó tricótomos', de flores verduzco-amarillentas con 4 pétalos; estilo largo; l>aya sub-globosa, negra, lustrosa con 1 se- 284 DIVISIÓN SEGUNDA. — FANERÓGAMOS. milla y ancha de 4 " ; bejuco alto y muy largo de tallo, sin fuerza, casi herbáceo v carnudo, trepador ó mejor sarmentoso y sostenién- dose por sus zarcillos, bastante grueso y casi cilindrico, algo nudo- so. C. sicyoicles, L.: C T. V. 595-592. 2. Hojuelas aovadas lampiñas, aserradas lijeramente por arriba del medio ó sub-enteras, cuyas dos laterales son oblicuas, algunas veces acuñadas por la base, con los dientes acostados, distantes y setáceos. Brazos de las umbelas generales pubescentes y ordinaria- mente bífidos, con flores encarnadas, así como los pedicelos ; estilo largo; baya purpúrea, ovoídeo-globosa, ancha de 2"'-3'" y monos- perma. Bejuco bastante alto y muy largo, sosteniéndose á favor de sus zarcillos, de tallo y ramos algo angulosos. C. trifoUata, L. C. T. V., 590. — Hojuelas acuñado-ob-aovadas, redondeadas por el ápice, lampiñas, profundamente dentadas por arriba del medio, cu- yos dientes, contiguos y abiertos, son anchos y con una punta, algo suculentas. Brazos de la umbela general simjdes, cuyas flores ver- doso-amarillas tienen 4 pétalos ; estilo largo; baya negra, globosa, monosperma y ancha de 2'". C, acida, L., etc., C. T. V. 590. G. II. ViTis , L. Flores siemxjrehermafroditas; hojas largamente pecioladas, mas ó menos profundamente lobadas, algo pubescentes, planas ú ondulosas, de color verde mas ó menos pálido, con los pe- ciolos coloraditos; bayas de forma y tamaño muy variados, mora- das, negras, blancas ó blanco-amarillentas, con ó sin semillas. V. mnifera, L.: C. T. V., 589. — Flores dioicas ó polígamas en racimos grandes y muy furnidos, amarillentas y pequeñitas ; hojas ancha- mente acorazonadas, con una punta, de cara superior alampiñada, mientras la inferior es tomentoso-blanquecina ó aleonadita, cuyo pelo algunas veces persiste solamente en las nervaduras, dentadas, cuyos dientes están terminados poruña glándula, algunas veces algo lobaditas y verdes por ambas caras en los vastagos tiernos, largas de 5 1|2, 5" sin contar el peciolo, que lo es de 2 li2-3", y anchas de 4 á4 1|2". Bayas generalmente pequeñas, purpúreas, globosas, an- chas de 2-3'", con semillas ob-aovadas, llanas por el vientre, con- vexas y estriadas por el dorso; arbusto sarmentoso, muy ramoso y bastante alto como de 10-15'. Y. cariboba, De, etc.: C.T. V. 589. Familia m. — HIPOCRATEACEAS. —Arbustos ó frútices sarmentosos ó abejucados, con hojas opuestas, simples, coriáceas, enteras ó dentadas, acompañadas de estípulas, cuyas flores peque- ñas, axilares y dispuestas en hacecillos ó en corimbos, se componen de un cáliz persistente 5-fido, de una corola con 5 pétalos iguales, de 3-5 estambres reunidos por sus filamentos formando un antróforo tubuloso é insertos por el interior de un disco ancho; pistilo simple formado de un ovario único trígono, trilocular, con óvulos defini- dos y ascendentes, de cuyo vértice sale un estilo simple ó 3-fido con otros tantos estigmas ; el fruto consiste en una cápsula membranosa de tres ángulos ó con tres alas, otras veces es abayado con tres cel- das conteniendo cada una 4 semillas, sin endospermo y cuyo embrión es derecho. HippocEATEA, L. — 1. Hojas eliptical-oblongas aserraditas, cimas sin pedicelos, estériles y capilares, 2. — Hojas enteras oblongas DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LIY. — RAMNOÍDEAS. 285 largas de 4"-6"; panojas lampiñas igualando las hojas y con un sin número de pedicelos estériles x capilares, color de orin, de 8'", los cuales son mucho mas largos que los fértiles entremezclados con ellos; flores de lf2'" de diámetro, con pétalos de limbo aovado y ob- tuso; estambres muy cortos y contiguos; disco capiliforme y espeso; carpidios ob-aovados ú oblongos. C. comosa, Sw. : C. T. Y., 437. 2. Hojas elípticas ú oblongas; cimas color de orin, mas largas que las hojas, con los brazos distantes, cuyas ñores, verdoso-amari- llas, tienen los pétalos ol)-aovados y largos de V" 1|2; disco obturo cónico; estambres de filamentos cortos; carpidios espatulado-oblon- gos, escotados por el vértice, largos de 1" l[2-2" 1|2 y anchos de 8'", con 4-6 semillas. H. scandens, Jacq. : C. T. Y., 437. — Hojas oblon- gas; panojas color de orin y aterciopeladas, ordinariamente mas largas que las hojas, cuyas cimas parciales que las forman están dis- tantes, de flores con pétalos oblongos y largos de V" , los filamentos cortos; carpidios ovales ú óvalo-redonditos, de vértice redondo, lar- gos de \" 1[2 y anchos de 1", con 4 semillas. H. ovata^ Lam. H. vo- lubilis, Sw. L. lcevigata,'Ric\i. II. discolor, Mey. CLASE LIY. —RAMNOÍDEAS. Familia 124. — RAMNBAS 6 RAMnIcIJAS.— Arlnis- tos ó arbolitos con hojas simples, coriáceas, enteras, pecioladas, al- ternas y rarísimas veces opuestas, cuya inserción está provista de dos estípulas ó foliáceas, caducas ó persistentes; flores pequeñas por lo común, verdusco-amarillentas, tan pronto hermafroditas como unisexuales y polígamas, de inflorescencia muy variada: en efecto, ora están solitarias, ora en grupos, ora en corona ó en hacecillos axilares; otras veces en racimos ó en capitules terminales, pero siempre constan de un cáliz monosépalo mas ó menos tubuloso, mas ó menos adhcrente al ovario, con 4-5 lóbulos y valvar: de una co- rola con 4-5 pétalos, que suelen faltar algunas veces y bastante fre- cuentemente escamiformes y cóncavos, insertos en la parte superior del cáliz ú otras veces pegados en un disco situado en el fondo }' al- ternando con sus divisiones, unguiculados, sueltos ó á veces reuni- dos por la base y formando así una corola seudo-monopétala; estam- bres 4-5 alternos con los segmentos calizinales é insertos en la márjen del disco perijínico. Pistilo simple, formado de un ovario único, libre, semi-ínfero ó completamente infero, con 2 ó con 4 cel- das monospermas, raras veces dispermas, de cuyo vértice salen tan- tos estilos como celdas tenga, terminándose cada uno por un estig- ma simple. El fruto es una baya, una drupita ó un nuculanio; otras veces es capsular, cuyas ventallas se llevan al desprenderse los tro- forpermos pegados en medio de su cara interior, cuyas semillas de- rechas no tienen azilo, pero sí un endospermo carnoso en que está alojado un embrión homotropo de cotiledones largos y pequeños, y cuya radícula es superior. G.L ZizYPHUS, L. — 1. Ramitas no angulosas, 2. — Ramitas con 5 ángulos, lampiñas, que se vuelven ramos tortuosos, flexuosos, con 286 DIVISIÓN SEGUNDA. — FANERÓGAMOS. espinas estipulares rectas, y que llevan hojas algo redondeadas, ovales é inequilaterales ó un poco acora,zonadas ó recortaditas, co- riáceas y lampiñas : cáliz tomentoso, color de orin. Z. havanensis. 2. Ambos aguijones estipulares, corvos, hojas ovales y algo re- dondeadas, aserraditas y con vello corto y suave hasta en el peciolo, las ramitas tiernas y las flores que son en corimbos axilares ; fruto amarillo pálido, casi globoso y lampiño. Z. tomentosa, Poir. — Uno de los aguijones corvo, mientras el otro es recto; hojas dentadas; flores monoicas en racimos axilares, cuyos cálices no tubulosos son sin escamas petaloídeas; flores femeninas con dos estilos, que se ter- minan por un estigma bífido; fruto amarillo pálido, con un hueso unilocular. Z. ignanea, C. T. V., 6*74. Gr. II. GoLUBRiNA, Rich. — l.Yejetales mas ó menos pubescentes ó tomentosos, 2. — Arbusto lampiño, cuyas ramitas, lampiñas y ci- lindricas, llevan hojas aovadas, aserraditas, con las nervaduras ar- queadas y algunas veces triplo-nervias, largamente pecioladas y largas del" l[2-2'' li2 sobre 1-1" 1|2 de ancho; cimitas cortamente pedunculadas, mas cortas que el peciolo durante la floración; cáliz lampiño: estilo cortamente 3-lobo; cápsula globosa, ob-aovada, tres veces tan larga como la cúpula adherida con ella, verdosa y de 4'" de diámetro, con semillas redondeaditas, ovales, convexas por el dorso, algo aogulosas por el lado interno, de embrión con cotiledo- nes carnudos, llanos y tan espeso como el endospermo, que está par- tido en dos segmentos correspondientes á los lados de las semillas. C. asiática, Brogn. Ceanothus asiática, L. Rliarmts asiática, Lam. 2. Ramitas cuyo tomento es color de orin, ó alampiñadas, 3. — Arbolito enteramente tomentoso, cuyas ramitas, color de orin, lle- van hojas ovales ó eliptical-oblongas, obtusas ó aguzadas, enteras y con las dos caras densamente tomentosas, de nervaduras laterales, paralelas y aproximadas, haciendo parecer las hojas como plegadi- tas según su dirección ; estípulas largas y setáceas; flores peque- ñas, muchas y axilares; ovario de vértice globoso, pero áspero. C. ciihensis, Brogn. Ceanothus cwliensis. Rich. 3. Árbol de 20'-30' de altura, cuyas ramas estendidas terminan por ramitas tomentosas color de orin y llevan hojas aovadas ú oblon- gas, bien enteras, obtusas ó con una punta por el vértice y sub- cordiformes ó redondeadas por la base, sin glándulas, con las ner- vaduras arqueadas, cuyas mayores son largas de 4-3 1^2-6" sobre 2 lf2-2-3 de ancho, de cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior es color de orin, alampiñada ó tomentosa sobre las ner- vaduras escepcionalmente; cimitas umbeliformes , pedunculadas, ordinariamente mellizas ó temadas, casi tan largas como los pecio- los, que lo son de 8 á 10"'; cáliz tomentoso, color de orin esterior- mente, de 2'" de diámetro y cuyos lóbulos son tan largos como los pétalos; estilo 3-lobo por el ápice: cápsula sub-globosa, mas de dos veces mas larga que la cúpula y adherida á ella, negra y de 4'" de diámetro. C . ferruginosa, ^vo^n. Jíkamus colubrinus, L. Ceanothus ferruginosa, Lam. — Arbusto ó árbol bajito: tiene las ramitas alampiñadas y con hojas elíptico-lanceoladas, bien enteras, de már- jen glandulífera por arriba de la base, lampiñas ó lijeramente pu- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LV. — TEEEBENTÍNEAS. 28'7 bescentes ó alampiñadas inferior-mente, de ordinario con una punta y obtusas por el vértice, con las nervaduras arqueadas, largas de 4 li:2-4" y anchas de 1 li2-l 3í4-2", con el peciolo largo de 8-10"'; cimitas contraidas, cáliz pubescentito esteriormente y de V" 1{2 de diámetro; estilo profundamente 3-fido; cápsula globosa, tres veces tan larga como la cúpula adherida á ella, purpúrea y ancha de 2'"- 3'". C. reclhiata, Bro^n. Ceanotlms redinatus, L"-Her. Khamus elip- tictis,Sw. C. T.y., 167. G.III.GouANiA,L.— 1. Fruto con 3 alas, 2. — Fruto sin ó con alas, hojas festoneadas, ovales, sub-pubescentes ó alampiñadas inferior- mente, largas de 3 l{2-4" 1{2, con el peciolo de como 4'" de largo, y anchas 2 1x4 á 2" lr2, cuyas ramitas que las llevan se terminan ora en pedúnculos y otras veces en zarcillos ; flores en racimos sim- ples terminales, cuyos mas inferiores son axilares ó laterales. G. puiescens, Lam. Cr. martinicensis, Poir. 2. Ramitas pubescentes de hojas elípticas, elíptico-aguzadas, ob- tusas ó cordiformes por la base, aserradas, y cuyos dientes obtusos, distantes, son sin glándulas ó con glandulitas diminutas y á veces apenas visibles, con las venas terminales hacia la márjen, lampiñas ó alampiñadas, de ordinario largas de 1 1|2 á 3" y anchas de 1 lf2- 2-1", con el peciolo largo de 6 á 8'". Racimos pubescentes apenas mas largos que las hojas, cápsula lampiño-escotada, cuya ala es. dos veces mas larga que la celda, larga de 3-4'" y ancha de 4-5"', con una escotadura profunda terminal. G. domingensis, L. G. glahrata, Jacq. : C. T. V., 168. Ramitas cubiertas de bozo color de orin, lle- vando hojas aovadas ó aovado-oblongas, sub-escotado-acorazonadas por la base, festoneado-aserradas, con las venas espesitas y tan lar- gas como ellas, y terminándose en dientecitos glandulíferos, aser- raditos, de cara inferior ordinariamente tomentosa ó pubescente y color de orin , algunas veces alampiñadas ; de flores _en raci- mos simples, axilares y mas largos que las hojas, distantes en ellos, velludo-tomentosos ; cápsula velluda, subtrunca, cuyas alas son dos veces tan anchas como la celda, redondeaditas y membranosas, pe- queña, lijeramente escotada, larga de 2-3'" y ancha de 3-4'", G. tomentosa, Jacq. SECCIÓN II. — PERIJINOS LEJITIMOS. ■ ORDEN lo. — AXOSPERMOS. SUB-ÓRDEN 1°. — EXALBUMINADOS. CLASE LV. — TEREBENTÍNEAS. Familia 125. — BURSERÁCEAS. —Frútices, arbustos y ár- boles mas ó menos altos, corpulentos y frondosos que de ordinario son resinosos, con hojas alternas, compuestas é imparipinadas, al- gunas raras veces opuestas, con puntitos glandulosos transparentes, 288 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. con ó sin estípulas peciolares; flores muy pequeñas, hermafroditas ó unisexuales, tan pronto monoicas ó dioicas como polígamas, dis- puestas en espigas, en racimos j en panojas axilares ó frecuente- mente terminales: se componen de un cáliz persistente monosépalo con 3-5 segmentos, de una corola cuyos pétalos 3-5 y alternos con los lóbulos del cáliz, son mas largos y se insertan por debajo de un disco libre ó que forra el fondo del cáliz, con estivacion valvar: suelen faltar alguna que otra vez ; estambres 10-6, dispuestos en dos ó una sola serie, insertos junto con los pétalos y mas cortos que ellos, cuyos filamentos tubulosos , libres ó monodelfos por la base llevan anteras introrsas, biloculares y lonjitudinalmente dehiscen- tes. Pistilo formado de un ovario único libre con 2-5 celdas, de las cuales algunas suelen abortar, con 2 óvulos en cada una, colaterales y anátropos : de su vértice sale un estilo simple que falta algunas veces; estigma entero ó 2-5-lobo ; fruto drupáceo conteniendo desde 1-5 huesos monospermos, otras veces consiste en una cápsula cuya dehiscencia es septícida y de endocarpio casi huesoso ; semillas col- gantes, redondeadas, angulosas ó comprimidas, á veces membra- nosa por los bordes, de embrión sin endospermo, con los cotiledones plegados y algunas veces tripartidos, y cuya radícula corta y dere- cha es superior. G. I. IciCA, Aubl. — Flores en eorimbos axilares; hojas con 3-5-7 hojuelas, elíptico-lanceoladas, aguzadas, largas de 4-2'' y anchas de 12-6'"; eorimbos dos ó tres veces mas cortos que la parte del raquis que no carga hojuelas, con pedicelos dos veces tan largos como las flores, ordinariamente temadas, de cáliz diminuto, con dientes apenas pronunciados, dé 4 pétalos arrollados por el vértice, pubescentes por la márjen, largos de Y" y conteniendo los estam- bres encerrados. ./. hejJtapJiylla, Aubl. Amyris ambrosiaca, Mey. /. copal, Rich. — Flores en panojas axilares, con hojas de 5 hojue- las elíptico-oblongas, sub-coriáceas, aguzadas, lustrosas, largas de 3-3" 1|2: á veces las hojas son paripinadas; flores en panojas axila- res tres veces mas cortas que los raquises, con bracteitas diminutas, de brazos lijeramente blanquecino-tomentosos ; 8 estambres algo. mas cortos que la corola, cuyos pétalos tienen la prefloracion valvar; anteras lineares-obtusas , algo dilatadas interiormente, escotadas por la base, dorsifijas, biloculares, lampiñas, dehiscentes lonjitudi- nalmente por la parte interna y todas conformes; estilo recto, lam- piño, igualando á los estambres y terminando por 4 estigmas cabe- zudos./. taco.mahaca. C. T. Y., 449. G. II. BuESERA gitmmifera, L. B. acuminata, W. B. simplifolia, De. : C. T.V., 123-448-550. G. III. Hedwigia lalsamifera, Sw. Caproxylou hedAvigii, Tuss. : C. T. Y. 447. ' Familia 126. — ESPONDlACEAS.— Esta pequeña familia que formaba una tribu de la gran familia de las Anacardiáceas ó Terebintáceas se diferencia de ella por su fruto, que consiste en una drupa mas ó menos gruesa, de forma y tamaño muy variados y cuyo hueso está cubierto de hebras mas ó menos abundantes; tiene 5 cel- das monospermas, de las cuales algunas suelen abortar , pero visi- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LV. — TEREBENTÍNE AS. 289 bles en el ovario, cuyo vértice lleva tantot> estiloíí cuanta?) celdas hay; flores pequeñas en panojas terminales y que de ordinario salen antes que aparezcan las hojas, con 5 pétalos insertos en un disco fes- toneado situado en derredor de la base del ovario, de estivacion empizarrada; estambres 5-10 ; ovario 5-locular, con uno ó dos óvu- los ; semillas sin endospermo, cuyo embrión tiene los cotiledones convexo-planos; árboles mas ó menos grandes, ordinariamente al- tos, frondosos y bastante corpulentos, resinosos y con hojas simples ó compuestas. G. I. Spondias,L. — Árbol alto como de 40'-50', con las ramas un poco distantes, de hojas largas de 8-9", cuyo raquis lo es de 5 1¡2 á" 6, con 3-8 pares de hojuelas desiguales, pecioladitas, aovado- lanceoladas ó lanceoladas, aguzadas, sub-enteras ó aserraditas, de base inequilateral, largas de 4-3'' 1^2 y anchas de 2-1 1|3'', con el peciolo de 1-1"' 1(2 de largo; flores pequeñas amarillentas en raci- mos apanojados, frecuentemente largos de 6-12"; drupa ovoidea larga de 2" j amarilla, S. lútea, L. >S'. moubm, Jaca. jS. ci/therea, Tuss. iS. graveolens, Macf. S. myroialanus, Mey. : C. T. V., 125. — Árbol bajito de 15'-20' de alto lo mas, con los ramos estendidos, cu- 3^as hojas están formadas de 8-10 pares de hojuelas cortamente pe- cioladas , eliptical-oblongas , obtusitas y de ordinario aserradas. Flores purpurinas en racimos simples, laterales, mas cortos que las hojas y paucífloros : drupa ob-ovoídea, larga de 1", moradusca. ;S'. ptf^rpurea, L. /S'. myrohalamts, Jacq. ;S'. cironella , Tuss. S. LiUea, Macf. :C. T.Y., 126-(516. G. 11. Mangífera indica, L. : C. T. V., 127. Familia 127. — AMIRIDEAS ó AMIRIDACEAH. — Ar- bustos ó árboles resinosos, con hojas imparipinadas (3 de tres en rama, opuestas y con puntos glandulosos transparentes; flores her- mafroditas en panojas axilares ó terminales, constando de un cáliz pequeño regular, persistente, con 2-5 segmentos; de una corola con 2-5 pétalos hipójinos, casi unguiculados y de prefloracion imbricada; estambres libres 5-10 ; pistilo simple formado de un ovario único libre, colocado sobre un receptaculito ó disco, unilocular y con dos huevecillos colgantes, cuyo vértice sobrelleva un estigma sentado y cabezudo ; fruto drupáceo indehiscente, monospermo, de semilla sin endospermo y cuyo embrión tiene cotiledones espesos y carnosos, la radícula es cortísima y superior. Amyris, L. — 1. Hojas con 3-5 hojuelas; anteras ovoídeo- oblongas, 2. — Hojas con 3-5-7 hojuelas aovado-lanceoladas ó elíp- ticas, aguzadas, bien enteras ó apenas festoneaditas, verdes por am- bas caras, de cara inferior mas pálida, con venas reticuladas, lijeramente proeminentes por la superior, largas de 4-2" y anchas de 2-9"' ; panojas grandes mas largas que las hojas ó iguales á ellas; pétalos tan largos como los estambres ó igu¿ilándoles; anteras re- dondeaditas; drupa ovoidea, larga de 3-4"' y ancha de2"'.zl.. hol- samifera, L. A. toxifera, W. A. pínnata, Kth. A. sylvotica, Rich. 2. Arbusto de 5-15' de altura, con hojas de 3 ó 5 on rama, cuyas hojuelas aovadas ó dcltoídeo-redondeaditas, con una punta, apenas festoneaditas ó sub-enteras, son glaucas por la cara inferior, largas TOMO II ■ ;19 290 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. de V" l\% sobre V" de ancho y con io^ peciolos de 2'", tienen sus venas dispuestas á manera de redecilla y visibles por ambas caras ; panojas mas cortas que las hojas, pétalos ovales tan largos como los estambres; drupa globosa, pequeña, purpurina 3' con 2'" de diáme- tro. Á. sylvatica, Jacq. A. clycitripa, Spreng. A. floribunda, Nutt. A. cymosa, Rechb. — Arbusto del tamaño j altura del anterior, que parece mucho, pero con las hojas de tres en rama ó unifoliola- das, largas de 2 li2-l" 3í4, con el raquis de 18'", cujas hojuelas aovadas y con una punta obtusita, bien enteras ó apenas festonea- ditas, verdes por ambas caras ó mas pálidas por la inferior, son lar- gas de 2- 1'' ll2y anchas de 10 á 12"\ con los peciolos de 3'" ; co- rimbos mas cortos que las hojas, pétalos ovales mas largos que los estambres, drupa globosa, negra, de 3'" de diámetro y pisiforme. A. maritima, Jacq. A. lunani, Spreng. C. T. V., 450. Familia 128. — ZUMA QUINFA S. ■— Avhnsios ó arbolitos de hojas alternas, siempre compuestas é imparipinadas ; flores peque- ñas, hermafroditas, apanojadas ó racimosas, formadas de un cáliz pentasépalo, cuyos sépalos están soldados entre sí por la base é in- sertos con los 5 estambres en un disco calizinal ; ovario unilocular, único y uni-ovulado : fruto drupáceo, con la semilla pendiente de un cordoncillo procedente de la base de la celda, sin endospermo, de embrión con cotiledones foliáceos y raicilla doblada sobre la juntura de ellos mismos. G. I. Rhüs onetopitcm, L. : C. T. V. 128. G. II. CoMOCLADiA,S. Br. — 1. Hojas con hojuelas nunca espino- sas, 2. — Arbusto de 4-8' de altura; hojas con unos 5-9-10 pares de hojuelas, de las cuales algunas 3-5 son espinosas, sentadas, lam- piñas, aovado-deltoídeas y sub-acorazonadas por la base, largas de 8 á 9'" sobre como 7 á 8 de ancho, desiguales; panojas mas cortas que las hojas, largas de 5 1|2 á 6", con el raquis de 4 1|2 á 5" 1 j2 ; flores ao-rupadas en espigas largas de 6"; drupa oblonga roja. C. ilicifoUa, W.:C.T. ¥.,7. 2. Arbusto de 10-25' de alto, de hojas largas de 1-2', con 8-10 pares de hojuelas pecioladas, lampiñas ó alampiñadas por la cara inferior, bien enteras, oblongas, con una punta, sub-truncas por la base, las inferiores decrescentes, aovadas; panojas pubescentitas ó alampiñadas, tan largas como las hojas, cuyas flores son fasciculadas y largas de li2'"; drupa oblonga, negro-purpurina. C. Í7ite grifo lia, Jacq. : C. T. V., 9. — Arbusto mas pequeño, cuyas hojas largas de 6", tienen 5 pares de hojuelas sésiles, alampiñadas por la cara superior, peludas y color de orin por la inferior, oblongas, obtusas, sub-truncas por la base, enteras, las inferiores mas pequeñas; pano- jas peludas y color de orin, tan largas como las hojas; flores agrupa- das. C.propinqua, Kth. C. T. Y., 8. Familia 129. — ANACARDIFAS ó ANACARDIACFAS. ■ — Arboles de hojas alternas, simples ó compuestas ; flores pequeñas, apanojadas, hermafroditas ó polígamas, constando de un cáliz con 3-5 sépalos algunas raras veces adherentes un poco al ovario, mas ó menos soldados entre sí por la base ; de estivacion empizarrada ; de una corola con 4-5 pétalos; estambres 8-10 insertos, junto con DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVl. — LEGUMINOSAS. 29] los pétalos en un disco calizino en el fondo del cáliz mismo; ovario único unilocular, uniovulado; fruto drupáceo ó seco, cuya semilla está sostenida por un cordoncillo procedente del fondo de la celda r doblado por el ápice, sin endospermo, y cuyo embrión tiene cotiledo- nes gruesos y replegados sobre la radícula. Anacardium accidéntale . L. :C. T. V.,10. CLASE LVI. — LEGUMINOSAS. • Familia Yi^. — FABACEAS ó LFaU3íIN0;SA>S. — Vlama^ herbáceas anuales ó vivaces y frecuentísimamente de tallos mas o menos largos y volubles; matas enredaderas ó bejucos, frútices, ar- bustos; arbolitos y árboles grandes, corpulentos y coposos, espino- sos ó inermes ordinariamente, con hojas compuestas, descompuestas ó sub-compuestas, cuya forma, tamaño y disposición de la hojuelas que las forman varían tanto como su número y su consistencia, son sésiles ó pecioladas; las hojas son á veces simples por causa del aborto de las hojuelas, siempre alternas, cuyo raquis, á veces pro- visto de una ó algunas glándulas, está acompañado por su inserción de dos estípulas persistentes ó caducas, de figura y tamaño muy variados, y que algunas veces están reemplazadas por igual número de espinas ó de aguijones ; bastantes veces una estipulita parcial acompaña los peciolos de las hojuelas y dos se hallan en la inserción de la hojuela impar; las glándulas del raquis, cuando existen, están situadas por la base sola ó por la base ypor el vértice, otras veces las hay entre las dos hojuelas, formando los pares, sea entre algunas solamente ó rarísimas veces entre todos y siempre por la cara supe- rior mas ó menos acanalada, este raquis se prolonga algunas veces en zarcillo ó está terminada por una puntita mas ó menos caduca y bracteiforme, flores bastante grandes de ordinario y no rara vez muy hermosas, generalmente hermafroditas, otras veces, pero con mucha menos frecuencia, polígamas, de figura y de inflorescencia muy variada, pero que constan siempre de un cáliz monosépalo mas ó menos tubuloso, con 5 dientes ó lólmlos mas ó menos profundos y desiguales, de manera que algunas veces forman como dos labios y entonces el cáliz parece bilabiado, de base acompañada de brácteas que suelen faltar bastantes veces, y que cuando existen se vuelven no rara vez invólucro-monófilo ; de una corola que falta algunas ve- ces, pero que de ordinario es bastante grande y se compone de 5 pétalos mas ó menos ungüicut^.dos, iguales ó casi iguale? entre sí y forman una corola casi regular y mas ó menos abierta, otras veces son desiguales, de figura y tamaño muy diferentes, y constituyen una corola irregular llamada amariposada ó papilionácea ; 10 son los estambres, ya diadelfos, ya monadelfos y raras veces libres; sin embargo, suelen á veces esceder de ese número y son libres ó mo- nadelfos y hasta poliadelfos; en ciertos géneros, algunos de los 10 estambres suelen abortar y están reemplazados por apéndices de figura y tamaño variados : son desiguales : anteras bilorulares mas ó menos grandes abriéndose por una grieta lonjitudinal ó por poros 292 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. situados en su ápice. El i^istilo siempre simple, en forma de un ova- rio único comprimido, mas ó menos largo, algo oval y oblongo, lampiño ó pubescente, sostenido por un podójino mas ó menos lar- giiito, unilateral, á veces algo arqueado, con los dos lados algo des- iguales, unilocular, con pocos ó con muchos óvulos asidos en un tro- fospermo sutural con que están pegados á favor de un podospermo mas ó menos desarrollado y raras veces sésiles; el vértice del ova- rio se prolonga en un estilo un poco lateral y por lo común bastante largo, encorvado hacia arriba, terminándose por un estigma sen- cillo de forma muy variada, aveces bilamelado, con pelo ó lampiñf). El fruto es siempre una legumbre ó vaina de figura y tamaño muy variados, algunas raras veces indehiscente, conteniendo pulpa ó no y partida en algunas celdillas monospermas por tabiques falsos, al- gunas otras veces está como articulada y se separa en algunas pie- zas monospermas, pero de ordinario es continua y se abre en dos ventallas que tienen las semillas pegadas en su borde interior por medio de podospermos mas ó menos largos; tales semillas de figura, de color y de tamaño muy variados, no tienen nunca endospermo y son formadas del tegumento propio ó epispermo, á veces casi córneo y muy duro, pero comunmente membranoso ó apergami- ' nado, inmediatamente aplicado á un embrión de cotiledones muy gruesos; algunas raras veces la vaina es samariforme : ordinaria- mente lisa y lampiña, pero á veces pubescente y hasta cubierta de muchos pelos, cuva picadura causa escozor. Sul-famüia V. — PAPILIONACEAS ó AMARIPOSADAS. — Sus flores se componen de un cáliz cuyas divisiones son iguales ó desiguales, y en este último caso bilabiado, el labio superior cons- tando de 3 segmentos ó dientes y el inferior de 2 solamente ; de una corola cuyos pétalos se insertan en un disco delgadísimo que forra el fondo del cáliz, y lo mas frecuentemente la parte interior del tubo hasta major ó menor altura y llevan nombres diferentes, de tal manera que el superior, ordinariamente mayor que los otros, envueltos mas ó menos en él en la estivacion y cuya figura, dispo- sición y tamaño varian muchísimo , se llama estandarte ó bandera , los lados laterales que á veces están provistos de una especie de diente ó apéndice por la base se denominan alas y- varian también mucho, tanto por su figura como por su tamaño y color; en fin, los dos inferiores enteramente libres, pero aproximados uno á otro ó mas ó menos soldados entre sí por su lado inferior, constituyen la quilla ó carena : los estambres son por lo común en número doble de los pétalos, raras veces menor por tausa de aborto, con anteras introrsas y biloculares, abriéndose las celdillas por una grieta lon- jitudinal y cuyos filamentos son libres, monadelfos ó de ordinario diadelfos , en este último caso un estambre solo es libre y corres- ponde á la hendidura del andróforo y al estandarte. El pistilo se compone de un ovario liso ó pubescente, sentado ó estipitado, cuyos huevecillos están por lo común dispuestos en dos series. La vaina ó legumbre es algunas veces interrumpida interiormente, por cuya causa entonces cada celda monosperma se desprende cuando madura en tantas piezas indehiscentes; alguna rara vez es el fruto samaroí- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVI. — LEGUÍ^ÍINOSAS. 293 deo Ó como drupáceo; las semilla.-, de ordinario mas ó menos reni- formes, son sostenidas por un podospermo mas ó menos distinto, que á veces se vuelve como carúncula, de embrión comunmente corvo y raras veces recto; hojas primordiales opuestas. Análisis dicotómica de las tribus y sul-trihis. 1. Embrión de radícula siempre encorvada, 2. — Embrión de radícula recta; 10 estambres monadelfos ó diadelfos, legumbre indehiscente samaroídea, ó frecuentemente interrumpida pors estrechamientos; cotiledones espesos y carnudos; radícula encor- vada y raras veces recta ; arbustos ó árboles bastante altos, cor- pulentos y coposos, de hojas imparipinadas con [las hojuelas fre- cuentemente alternas , rarísimas veces reducidas ú una sola. T, I. Dalbeegieas. B. 2. Estambres 8-9-10 siempre libres; legumbre indehiscente sa- maroídea ó con dos ventallas; cotiledones foliáceos ó algo espesos ; de ordinario árboles grandes y otras veces arbustos de hojas impa- ripinadas ó rara vez simples. T. II. Sofóreas. A. — Estambres muy rara vez libres. 3. 3. Estambres monadelfos ó diadelfos, 4. — Estambres 10 siem- pre diadelfos, con los cuales adhiere frecuentemente el estandarte ; legumbre con dos valvas y continua; hojas á menudo paripinadas, con zarcillo que va prolongando el raquis; yerbas anuales mas ó menos enredaderas. T. III. Yicieas. — G. I. Ervum leus, L. — G. II. Vicia sativa, L. — G. III. Xbr\js precatoo'ius, L.: C. T. Y., 669. 4. Legumbre continua y bivalvar, 5. — Legumbre lomentácea ó transversalmente dividida en algunas piezas monospermas articula- das entre sí y desprendiéndose por la madurez, y raras veces redu- cida á una sola pieza indehiscente ; estambres 10; cotiledones foliá- ceos ; plantas herbáceas anuales ó vivaces, algunas veces arbustillos, de hojas con una sola ó con tres hojuelas ó imparipinadas, frecuen- temente provistas de estípulas. T. IV. Hedisáreas. C. 5. Legumbre siempre continua ; cotiledones foliáceos durante la germinación ; hojas con una, tres ó muchas hojuelas frecuentemente paripinadas. T. V. Loteas, 6. — Legumbre continua ó con estre- chamientos de trecho en trecho, pero que nunca se desprende en piezas después de madura; cotiledones hipójeos ó epíjeos ; plantas herbáceas anuales volubles de hojas las mas veces de tres en rama; rarísimamente pinadas y con frecuencia provistas de estipulitas acompañando las hojuelas, ó arbustos. T. VI. FaSeóleaS, 8. 6. Estambres diadelfos ó raras veces monadelfos; legumbre de ordinario con dos valvas; hojas pinadas ó 1 folioladas. S.-T. I. Ga- légeas. — Estambres siempre diadelfos ó monadelfos solamente, 1. 7. Diadelfos: hojas con 3-5 hojuelas, cuyas venas ordinariamente alcanzan la márjen. S.-T. II. Trifolíeas. Trifolium repens, L. — Monadelfos; alas con un alveolo; hojas palmadas ó sin hojuelas. S.-T. III. Genísteas. 8. Cáliz acomi)añad() de dos l^racteitas situadas por su base, 9. — 294 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÜGAMOS. Cáliz sin bracteitas, pedicelos solitarios ó mellizos. S.-T. I. Rinco- SÍEAS. 1). 9. Pedicelos desprovistos de bráctea común por la base. S.-T. II. Clitoríeas. E. — Pedicelos fasciculados insertos sobre un nudo que sale del raquis. S.-T. III. Eüfaseóleas. F. A. Myrospermum, Jacq. Árbol grande y coposo, con hojas pi- nadas, largas de 6 1]2 á 1" , con el raquis de 5", formadas de 2-5 pares de hojuelas ovalo-lanceoladas, aguzadas, coriáceas, frecuen- temente emarjinadas ó ribeteadas por el vértice, con glándulas transparentes, de cara superior lustrosa v lampiña, mientras la in- ferior es alampiñada, largas de 5, 4 lj2" y anchas de 2 1{4 á 2", al- ternas, desiguales, con una punta de 6 á 8'". Flores blancas en raci- mos axilares mas largos que las hojas, de cáliz campanudo, con 5 dientes casi iguales cuyo impar es un poco apartado de los demás ; estambres mas cortos que los pétalos }' de anteras puntiagudas: le- gumbre samaroídea larga de unos 2", de ápice oblicuamente redon- deado, cuya celdilla contiene una semilla única, arriñonada, en- vuelta en un liquido balsámico que se vuelve resina. ALperuiferam, L. M. toluiferum, L. : C. T. Y., 443. — Árbol que se eleva á 40' y 50' de altura, bien corpulento y muy frondoso, con hojas formadas de 5-7 pares de hojuelas membranosas, oblongas ú ovalo-redondea- ditas, retusas ú obtusas, lampiñas por ambas caras y algo glaucas, estriadas á causa de lineas transparentes, largas de 10-12'" : flores blancas teñidas de color de rosa: legumbre tan ancha como su ala que se estrecha apenas por la base, algo arqueadita y con algunas venas ; larga de 2-3" con el ala, la legumbre sola larga de 8-10"', cuya celda contiene una semilla casi cilindrica, un poco comprimida por los estremos y arqueadita, sin liquido resinoso en su derredor, pero en las celdillas de las paredes de la celdilla se vuelve resinoso, larga de 8-9'" y ancha de 1 1í2-2"'. M.frutescens, Jacq. M. emar- ginatmn, Kl.: C. T.V., 219." B. G. I. Pterocarpcs, L. Hojas con 5-1-9 hojuelas oblongas obtu- sitas ó un poco puntiagudas, lampiñas y lustrosas, con bracteitas di- minutas : cáliz lampiño mas largo que el pedicelo pubescentito, corola larga de 6'"; legumbre lampiña estipitada, corchosa, áspera, con el eje oblicuo, ceñida por un ala estrecha, menos distinta por lado inferior, de 1 1^2-2" de diámetro, con el ala ancha de 3-4'" por el lado superior. P. draco, L.: C. T. V., 110. — Hojas con 5-7-9 hojuelas eliptical-oblongas, lampiñas y lustrosas. Bracteitas linea- res, frecuentemente casi tan largas como el cáliz tomentoso y de color de orin, mas largo que el pedicelo ; ovario sentado y tomen- toso; legumbre sésil, sub-membranosa, un poco mas espesa hacia su parte media. P. rohrii, Mey. Cr. II. Andira, Lam. Hojascle raquis largo de 5, 6, 8", con 4-8 pares de hojuelas opuestas, lanceolado-oblongas ú oblongas, aguzadas ó con una punta obtusa, lampiñas, largas de 4, 3, 3 1[2, 2 l\2" y an- chas de 1 1|2 á 2", algo desiguales ó casi iguales : flores rosado- moraduzcas en panojas grandes terminales pubescentes y color de orin, de cáliz campanudo, con dientes triangulares y obtusos, casi tan largos como los pétalos lampiños: ovario lampiño, largamente DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVí. — LEGUMINOSAS. 295 estipitado, con pelo por su múrjen anterior: legumbre ovoidea j como drupácea, larga de unos 2-2" li2 sobre 1-1" 1|2 de ancho, in- dehiscente. A. inermis , Kth.: C. T. Y., 765. Variedad con los pedicelos frecuentemente mitad tan largos como el cáliz, corola de 7-8''' de largo, con el estandarte ob-aovado, cuyo limbo es tres veces mas largo que el cáliz, A. sajñíidioides, Bentli. Pterocarpiis sapin- dioides. De. — Hojas de raquis largo de 5 á 6", acanalado, con 3-4-6 pares de hojuelas opuestas ó lijeramente alternas, oblongas, retusas ó mucronaditas por el vértice, de cara superior lampiña, mientras la inferior es pubescente color de orin ó alampiñada, largas de 4, 3 1|2, 3, 2 ];2" bastante desiguales y anchas de 2. 1 1t2", corta- mente pecioladas; flores moradas, largas de 7'" en racimos com- puestos tan largos como las hojas, con los brazos distantes y pubes- centes V color de orin, de cáliz campanudo, con los dientes trianeru- lares, casi igual á los pétalos ; ovario lampiño ; legumbre drupácea muy grande, irregular y corchosa. A. retusa, Al. A. anhletii, Beruh. Geoffroya piihescens, Rich. G. III. Vlscitux eri/tJ¿rÍ7ia , L. : C. T. Y., 566. G. lY. Platymis- ciUM PlatystacJmim.Benih. G.Y. Deepanocaepus lunatíis, Mey. G. YI. Hecastophyllum monetaria, Pers. Fterocarjms liecoMoi^hyl- lum, L.: C. T. Y.. 385. G. YII. Coumaruna odcmita. C. T. Y., 409. C.G. I. Desmodtum, Del. Legumbre lomentácea nunca sinuosa, 2. — Legumbre lomentácea siempre sinuosa igualmente por ambas márjenes, con tabiques estrechos y centrales, y artejos ret'culados é indehiscentes ; estípulas de ordinario orejudas y subuladas, flores racimosas: yerba tendida , cuyo tallo anguloso echa raices por la base, estendido y ramoso, delgado y largo de 1-2 1[2', de hojas con 3 hojuelas oval-oblongas ú oblongas ; lomento subsesil, ganchoso, pubescente, lijeramente estrechado por los tabiques, no tortuoso y con 2-7 artejos óvalo-lineares algo truncos por ambos estremos y cuyo terminal tiene punta; flores pequeñas, blanquecinas, pintadi- tas de color purpurino. D. scorpmrns, Desv. D. cin^retcm^ P(Kpp. 2. Legumbre lomentácea de suturas continuas siempre, 3. — Le- gumbre lomentácea cuya sutura es continua ó lijeramente festonea- da con los artejos reticulados, medio redondeados ó medio ovales é indehiscentes ; flores en racimos, 4. 3. xlrtejos reticulados, truncos pur los dos estremos, tarde dehis- c.rues; flores fasciculadas opuestas á las hojas: segmentos calizina- Ics tiesos y peludos ; yerba tendida, difusa y peluda, de hojas con 3 hojuelas aovadas ú ob-acorazonadas ; estípulas aguzadas y persis- tentes ; flores pequeñas cuya corola color carmesí está encerrada en el cáliz pedicelado mellizas; lomento sentado, lijeramente arquea- do, con 3-6 artejos sub-iguales, bien redondeados por la márjen dorsal. J). triflorum, De. Hedyearum trijiorimi, L. Sagotia triflo- ra, Yv'alp. Nicliolsonia triflora, Gr. C. T. Y., 812. 4. Yerba ascendente y difusa, con ramos cilindricos que llevan hojas con 3 hojuelas ob-aovadas ú óvalo-redondeaditas, obtusas, ra- ras veces sub-truncas; estípulas distintas; lomento sub-sentado, recto, ganchudo, pubescente, de sutura continua sinuosa por la parte media de la márjen dorsal, con 2-5 artejos semi-ovales ; flores pe- 296 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. quenas purpurinas. D. ascendens, De. D. racemiferum, De. D. ellip^ timí'^n, Macf. D. obovatmn, Vog. Heclysarum adscendens, Sw. G-.II. Arachis hypogea, De: C. T. V., 668. G. III. Beya elenus, De. Aspalthus elenus, L. Amerinum elenus, Sw. D . G. I .Rhynchosi a , Lam . 1 . Cáliz 5-fido con el lóbulo inferior mas largo, 2. — Cáliz 4-partido, casi tan largo como la corola, de seg- mento superior bíñdo ; mata tomentosa de tallo fruticuloso, trepa- dor y anguloso, muy ramoso, de hojas con 3 hojuelas aovadas, con una punta, 3-nervias, de cara inferior reticulada y con las nervadu- ras proeminentitas, mientras la superior tomentosa es blanquecina ó verdosa y de tamaño muy variado ; racimos formados de algunas ñores cortamente pediceladas y por grupitos, de cáliz largo de 3-6'", turbinado con el tubo muy corto y los segmentos lanceolados ú oblongo-lanceolados, aguzados y abiertos, casi tan largos como la corola amarilla ó pintadita de color purpúreo; legumbre no estre- chada, oblonga, pubescente ó alampiñada, larga de 10'" y ancha de 3'", con las semillas casi negras, arriñonado-redondeaditas de 2'" de diámetro. R. reticulata, De. R. latifoUa, Nutt. B. macrophyllay De. R. longeramosa, Mart. R. (Bqidnoxialis, Walp. Glycine reticu- lata, Sw. 2. Mata tomentosa ó alampiñada, de tallo como de 1' de altura, trepador, obtusamente anguloso, bastante ramoso, cuyas hojas son con 3 hojuelas aovado-romboídeas y agudas ; flores racimosas dis- tantes, de cáliz con lóbulos lanceolado-lineares, cuyo inferior es casi la mitad de lo largo de la corola amarilla, con el estandarte adornado de estrias purpurinas, largo de 3-4'" ; legumbre no estrechada, oblonga, aguzada por la base y larga de 6-10'", cuyas semillas ne- gras y reniformes son anchas de V" . R. mínima. R. ptcntata, De. R. carilcea, Tow. DoUchos mínima, L. — Bejucoalto, tomentoso ó á lampiñado, de tallo fruticuloso, trepador, subcilíndrico y muy ramoso, de hojas con hojuelas aovadas ó aovadoromboídeas, con una punta, largas de 1 2i3, 3 1|2, 2, sobre 2 4[5, 3 1^5, 1 4p de ancho. Racimos largos de 3 á 6", formados de algunas flores de cáliz con lóbulos aovado-lanceolados ó aovados, con una punta, cuyo inferior es mitad de lo largo del estandarte estriado de color purpurino, corola larga de 5 á 7'", amarilla; legumbre estre- chada entre las dos semillas, tomentosa ó alampiñada, larga de 10 á .12"' sobre 4'" de ancho, de semillas negras con un anillo color es- carlata amarillo al rededor del ombligo, redondeaditas y anchas de 2'" 1{2. R. phaseoloides, precatoría, carilím. De. Glycína pha7'seo- loides, Sw. G. II. Cajanus indícus, Spr. : C. T. V., 445. E. Centrosema xirqínianum', Benth. Clitoría virginiana, L. : C. T. V.,337. F. G. I. Phaseolus. — 1. Tallo voluble, 2. Tallo derecho ó vo- luble por la parte superior, seríceo ó alampiñado, cuyas hojas tie- nen hojuelas aovadas ó lanceoladas; pedúnculos elongados mas ó menos largos que las hojas, con pedicelos muy cortos, por fin re- corvados ; cáliz con 5 dientes aovado-lanceolados, con una punta, cuvo superior es algo mas corto; corola purpurina larga de 6 á 8'"; DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVI. — LEGUMINOSAS. 'Z91 legumbre sub-cilíndrica, serícea ó alampiñada, linear, aguzada y picuda, rectita o lijeramente arqueada, refleja, larga de 3 á 4" so- bre V" \yl de ancho. Ph. semierecUis ; Ph. Icitliy roldes, L. Pli. cro- tolarioides, Mart. 2. Tallos ordinariamente volubles, con las hojuelas aovadas y con una punta, 3. — Tallo siempre voluble, densamente velludo y color de orin, con hojuelas aovadas, de cara inferior lijeramente velluda; pedúnculos mas largos que las hojas, con algunas ñores amarillas, cuyo estandarte es íargo de 12'" : cáliz velludo 4-fido, de segmentos tan largos como el tubo y cuyo superior es bi-dentado; legumbre sub-cilíndrica, muy velluda, derechita, colgante de un pedicelo muy corto, larga de 3" sobre 3'" de ancho. Ph. lariocarpns. Ph, Mrsiitus, Mart. Dolichos lignosus, Jacq. D. Jacquhiini, De. 3. Cáliz 4-dentado, 4. — Cáliz 4 fido, cuyo lóbulo inferior lan- ceolado-linear es tan largo como el tubo, los laterales mas cortos falciformes, mientras que el superior es trunco; pedúnculos ordina- riamente mas cortitos que las hojas, con pocas flores purpurinas pintaditas de blanco, con el estandarte largo de 10 á 12'", cuya co- rola grande es 3 ó 4 veces mas larga que el cáliz; legumbre linear comprimida, rectita ó corva. Ph. cidenantMcs , Mey. Ph. tfuxilensis y cirrhosus, Kth. Ph. rostrakcs, Wall. Ph. ammnus, Macf. Ph. sti- rinamensis, Miq. 4. Cáliz mucho mas corto que las brácteas, con el diente inferior 3-angular y el superior trunco; pedúnculos mas cortos que las hojas ó iguales á ellas; flores ordinariamente verdosito-blancas, legum- bre con figura de sable, comprimida, arqueado-picuda, larga de 1" 1|2 á o" sobre 5 á 8'" de ancho, con 3-4 semillas sub-cuadrado- redondeaditas, purpuríneas ó blancas. Ph. Innatus, L. Ph. Upv.nc- tatus, Jacq. Ph. inamoenus, L. Ph, saccharatus,fecundusylineariSy Macf. — Cáliz tan largo como las bracteitas, cuyo diente inferior es trianp:ular y el superior sub-trunco; pedúnculos siempre mas cor- tos que las hojas ; flores ordinariamente blancas, legumbre oblongo- linear sub-comprimida, sub-torulosa, rectita, con pocas ó algunas semillas ovoídeo-oblongas, de color muy variado. Ph. vidgaris. Ph. nanus, L. Ph. gonospermus, Saw. Ph. compressus, De. Ph, dumo- sus, Macf. C. T. V., 696. G. II. Dolichos, L. — 1. Raiz nunca tuberosa, 2. — Eaiz siempre tuberosa, mas ó menos gruesa, de la cual salen tallos fruticulosos muy largos y volubles, con hojas de tres en rama, cuyas hojuelas rousub-rotondo-aguzadas; racimos axilares, con pedúnculo aovado- lanceolado, elongados ; legumbres rectas, pendientes, comprimidas, torulosas, aleonado-v; Iludas. D. Ucherosus, L.: C. T. V., 21^. 2. Tallo voluble lan.^.];.o : hojuelas anchamente aovadas: flores blancas en legumbre sub-cilii.lrica, mucronado-ungüiculada por el apéndice y torulosa. D. sesquipedcilis, L. — Tallo derecho, ramoso, lampiño, no voluble, con hojuelas aovado-sub-agudas, pedúnculos elongados paucífloros; legumbre recta, cilindrica, con semillas esfé- ricas blancas, con el ojo negro. D. sperospermus, L. G. III.Canavalia, D. G. — Tallos rastreros ó escandentes, alam- piñados, larguísimos y ramosísimos, hojuelas redondeaditas ú ob- 298 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. aovadas, obtusas de 3-4" de diámetro ; flores purpurinab de corola larga de una pulgada, con la quilla corva y obtusa , de cáliz cuyo labio superior, anchamente bíiobo, es mucho mas corto que el tubo ; legumbre oblonga, cortamente estipitada, larga, de 6 á 2" sobre 14 á 10"' de ancho, con dos crestas esertas salientes juxta-marjinales, distantes de V" de la sutura que acompañan, con semillas de color castaño opaco, ovoideas, sub-comprimidas y largas de 6 á 8'". C. oh- tiisijolia. C. rosea, De. Dolichos oMusifolius , Lam. D.roseus, Sw. Tallo siempre voluble y alampiñado, con hojuelas aovado-oblongas ó aovadas, mucronadas, de tamaño variable, pero ordinariamente largas de 2 á 5"; flores purpurinas, de corola larga de 1", con la quilla corva y obtusa, de cáliz cuyo labio superior redondeado, re- corvo y escotado es mas largo que el tubo : legumbre linear-oblon- ga, estipitada, cuyas crestas proeminentes y juxta-marjinales están distantes de 1-2'" de la sutura, con semillas rufo-brunas y lustrosas, ovoídeo-oblongas, sub-comprimidas y largas de 8"'. C. gladiata, De. — Variedad de semillas blancas con el rafe bruno. C. ensiformis. De. : C.T. V., 698. G. lY. Laelab vulgaris, Sw. Dolichos labial), L. Cuyas varieda- des son 3 : I*». Flores blancas; legumbres de 2" li2 de largo y 8"' de ancho, con semillas negras oval-redondeaditas y largas de 4'". L. leucarpus, Sw. Dolichos alUflorus, De. — 2'\ Corola blanca; legum- bre larga de 2 á 3" sobre 8 á 10'" de ancho, con semillas ovales, menos comprimidas, blancas y largas de 5'" L. perennans. De. Do- lichos nanMnicus , Saw. — 3*. Flores purpúreas; legumbre larga de 3" sobre 6 á 8'" de ancho, con las semillas oval-redondeaditas, pur- purinas y largas de 4'". L. ]ai(Tpurea, Dolich. piirpuo-eus, Jacq. C. T. y., 697. G. V. MucuNA, Ad. — 1. Hojuelas de cara inferior mas ó menos sedosa, 2. — Hojuelas enteramente lampiñas, elípticas, con una punta ; flores en racimos cortos, largamente pedunculados, de cáliz sedoso, 4-dentado, cuyos 3 dientes superiores son pequeños ó apenas notables y el inferior mas largo, con la corola larga de 18'", de es- tandarte aovado-lanceolado, casi tan largo como las alas, que son azules ó purpurinas, así como él; quilla de color verdoso-amari- liento, provista de un pico cartilajinoso, obtusito, igualando las alas; legumbre larga de 6" sobre 1" l{2de ancho con muchas líneas transversales, comprimida, espatulada, oblonga, callosa por la már- jen y pelitiesa, color de orin, con semillas orbiculares, comprimi- das, de 8 á 10'" de diámetro, brunas y casi enteramente ceñidas por el rafe. M. altissima, De. Dolichos altissima, Jacq. : C. T. V., 381. 2. Legumbre sin crestas transversales, oblongo- linear, corva, cubierta de pelo cerdoso, denso y bruno muy incaute; hojuela ter- minal mayor romboidea, las laterales oblicuamente deltoídeas; flo- res en racimos elongados, de cáliz 4-fido, cuyo lóbulo superior es anchamente deltoídeo, corola azul oscuro ó purpurina, larga de 15 á 18"', con el estandarte aovado, la mitad tan larso como las alas v algo mas pálido, y la quilla provista de un pico cartilajinoso y corta- mente eserto. M. ¡wuriens, De. Dolichos pniriens, L. : C. T. V., 34-380. Legumbre con muchas crestas transversas y foliáceas, cora- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LYI. --LEGUMINOSAS. 299 primida y pelierizada, larga de 4 á 5" y ancha de 1 1|2 á 2" : hojuela terminal aovada, y las laterales oblicuas: flores fasciculadas, de cá- liz cuyo lóbulo inferior lanceolado es tan larpo como el tubo, mien- tras el superior es mas corto y deltoídeo, de corola amarilla, larga de 2", con el estandarte aovado-lanceolado, la mitad tan largo como las alas, y quilla con un pico cartilajinoso cortamente eserto. M. nrens, De. JDoIíchos urens, L. Negretia urens, Tuss. : C. T. V:, 34. G. VI. Viga unguicAdata, Walp. Dolichos wngídcnlatns, Jacq. : C. T. V., 699. G. VIL Erytrhina, L. — 1 . Cáliz campanudo-trunco : pétalos de la quilla distintos y contenidos en el cáliz. 2. — Cáliz espatiforme, pé- talos de la quilla distintos y pequeños, 3. 2. xlrbol lampiño, aguijonoso, bastante grande, con hojuelas ao- vado-romboídeas, desiguales, cortamente pecioladas, con una brac- teita acompañando á la base del peciolo, la mayor ó terminal larga de 3 3p, 3 1{2", y anchas de 4 2\S, 3" 3\d, mientras las laterales son largas de 2, 3, 3" lyl sobre 2, 2 4[5, 1 3[4" de ancho; las hojas ente- ras son largas de 6 á 10", y el raquis de 4, 5, 6". Dientecitos del cá- liz largos de 4 á 6'". apenas notables, estandarte color de escarlata, erguido, linear-oblongo, obtuso y largo de 2" y 6 veces mas largo que las alas y la quilla, legumbre moniliforme, picudo-sub-compri- da, lampiña, con algunas semillas color de escarlata, ordinariamente con una mancha negra. C. corallodeudron, L. B. speciosa, Ander. : C. T. V.,446. 3. Árbol grande aguijonóse, con aguijones cónicos, sub-angulosos, corpulento y coposo, con hojuelas aovado-romboídeas por el ápicC; furfuráceo- tomentosas inferiormente y peluditas superiormente; inermes, largas de 4" sobre 4 3{4 de ancho, cuya terminal es trans- versalmente elíptica, mientras las laterales son oblicuamente sub~ redondeadas; cáliz hendido casi hasta la base y con 5 dientes dimi- nutos, largo de 9 á 12'" y tomentoso; estandarte reflejo, orbicular, color de escarlata, ancho de 1 á 1" 1]_2, alas y quilla casi tan largas com.o el cáliz; estambres mas largos que el estandarte, legumbre sinuosa, contraída inferiormente, aterciopelada y con algunas semi- llas. ^. vehitina, AV. — Árbol grande aguijonóse, con aguijones corvos, ó inerme algunas veces; hojuelas sub-aguzadas, truncas por la base y redondeadas, trinervias, lampiñísimas, inermes, cuya ter- minal es larga de 5-5" lf2 y ancha de 6 á 6" 1[2, mientras las late- rales son deltoídeo-aovadas; flores en espigas sub-terminales, es- parcidas, color grana y largas de 2" 1|2, de cáliz unilabiado, entero y lampiño; estandarte larguísimo linear, cuneiforme, recto; legum- bre torulosa larga de 8, 10" y polisperma. E. umhroscí, Kth. G. Ceot alaria, L. — Hojas sin hojuelas ó vueltas Alodios, 2. — Hojas largamente pecioladas y con 3 hojuelas. Planta sufruticosa anual, de tallo derecho, que se eleva á 2-3' de alto, pubescente, cu- yas hojuelas ob-aovadas ú ovales, largas de 1 á 2". son de cara in- ferior peluda ó alampiñada; estípulas diminutas y deciduas : racimos opuestos alas hojas, con 5 ó algunas flores de cáliz profundamente 5-fido, con lóbulos aovado-lanceolados, mas corto que la corola, verdoso-amarilla, larga de 5 á 6"', con la quilla barbuda por la mar- 300 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. jen Y terminada por un pico horizontal; legumbre colgante, larga de 16'" sobre 5"' de ancho, oblonga, subsesil y con pelo estendido. C. incana, L. C, cuhensis, De. Chrysocalyx schimperi, Hook. 2. Planta fruticulosa anual, de tallo derecho y alto de 1 á 2', peli- erizado, pubescente, con hojas ó filodios ovales ó lanceolado-sentados; estípulas anchamente escurridas, con el vértice semilunar y encor- vado : pedúnculos laterales elongados, con pocas flores amarillas, de cáliz profundamente 5-fido, ordinariamente tan largo como la coro- la, con los segmentos lanceolados; legumbre oblonga, lampiña, cor- tamente estipitada y larga de 1". C. stipularis. C. sagittalis. Des. — Del cual hay dos variedades, una cuyas hojas superiores, largas de 2", son oblongo-lanceoladas y obtusas. C. oMongata, y la otra sedosa-pubescente, con hojas lanceoladas, obtusas y largas de V", cuyas superiores mas pequeñas tienen solo 6'" de largo. C. espU'- dilla, Kth. C. sericea. H. G. I. Indigofera, L. — 1. Vejetales vivaces, sofruticosos, 2. Vejetales anuales y herbáceos ó fruticulosos, 4. 2. Legumbre mas ó menos cilindrica, 3. — Legumbre tetrágona, elongada, linear, larga de 1-2", con una punta refleja y con algunas semillas. Ramitas algo sarmentosas, pubescentitas^ con pelo denso, de hojas con 1, 2, 3 pares de hojuelas opuestas, ovales, mucronadas, de cara inferior pálida y largas de 8-12'"; estípulas largas, setáceas, racimos pedunculados, mas largos que la¿ hojas, de flores distantes y largas de 2-3'", cuyos lóbulos calizinales son largos y subulados. /. subulata, U. J. scadra, Reth. J. mucronata, Spreng. /. flaccida, Roxb. /. ¡espedezoides, Hook. — Cilindrica y tortuosa ó no, 3. — Algo comprimido-torulosa, arqueadita y de ordinario con 3 semillas, mata poco ramosa, derecha y alta de como 3 á 5', tomentoso-pla- teada, con hojas imparipinadas, cuyas hojuelas en número de 7-9 son obo vales, obtusas, escotadas por el vértice, como sedoso-platea- das, con la impar mavor que las demás. Flores en espigas erguidas. /. argéntea. C. T. \., 700. 3. Legumbre oblonga, linear, no tubulosa, mas espesa á lo largo de la línea dorsal , arqueado-refleja y con 3-6 semillas, larga de 5-6'" sobre 1{2"' de ancho; vejetal de tallo blanquecino pubescentito por los ramos y la cara inferior de las hojuelas opuestas y en núme- ro de 3-7 pares, espatulado-oblongas, largas de 10, 11, 14'", mu- cronadas y cortamente pecioladas ; estípulas subuladas; racimos sentados, lóbulos del cáliz triangulares. ./. añil, L. ./. tinctoria, De. — Legumbre sub-comprimido-cilíndrica, lijeramente torulosa, un poco espesa á lo largo de las suturas, estendida é inclinada á la vez, rectita ó encorvada, con algunas semillas, larga de 16 á 14'" y an- cha de 1'"; mata lijeramente tomentosa, 6-4 pares de hojuelas opuestas, ovales ú ob-aovado-oblongas ; estípulas subuladas, racimos sentados: lóbulos del cáliz triangulares. ./. tinctooia,L. C.T.V.,766. 4. Legumbre tetrágona, linear, mucronada, con 4-6 semillas; tallo con pelo suave y estendido ; 2-5 pares de hojuelas opuestas, ob- aovado-oblongas, de cara inferior lijeramente sedoso-pubescente ; estípulas largas y setáceas; racimos pedunculados, ordinariamente mas largos que las liojas, lóbulos del cáliz subulados y casi tan lar- DICOTILEDÓÍ^EOS. — CLASE LVl. — LEGUMINOSAS. 301 gos como la corola. /. J¿irsu(a,L. — Legumbres cilindricas, lineares, distantes, rectas j largaste 10-12'", con 6-12 semillas ; ramitas, peciolo j legumbres glutinosos y con glándulas estipitadas; 4-8 pa- res de hojuelas eliptical-oblongas, de cara interior pubescente, con pelo denso: estípulas largas y setáceas; racimos pedunculados, de ordinario mas largos que las hojas; lóbulos del cáliz subulados, casi tan largos como la corola. ./. viscosa, Lam. /. inquinaus, AV. G.II. TephrüSta, Pers. — 1. Estandarte adherente con el estam- bre correspondiente; flores racimosas; hojas pinadas. 2. — Estan- darte libre del estambre; legumbres hinchadas por ambas márjenes; flores axilares, fasciculadas ó solitarias ; hojas con 1-3 hojuelas; frútices de ramas en forma de varita, cilindricas, sedoso-tomentosas que llevan hojas cortamente pecioladas. con 1-3 hojuelas linear- lanceoladas, obtusas, de cara superior lampiña, mientras la inferior es sedoso-tomentosa y plateado-lustrosa, largas de 3-2" y anchas de 1-1 1|2", cortamente pecioladas, estriadas por muchas venas rec- tas, estípulas diminutas, setáceas; pedúnculos axilares 3-1, tan lar- gos ó mas cortos que el raquis, con pedicelos largos de 2-1'" y de vértice dilatado, lóbulos del cáliz lanceolados, cuyo inferior es mas largo; estandarte sedoso, estilo lampiño, con un estigma pincelifor- me. T. brecipes, Benth. Cytisus sessüijlorits, Vo\y. Rhinchosia hre- vipes, De. Frioscrne hrei'ipes, Walp. (\ T. Y., 548. 2. Vejetales fruticulosos, perennes, 3. — Planta herbácea ó fruticu- loso, anual, de tallo ascendente alto de l-2',pubescentitoy anguloso superiormente, de hojas con 4-(3 pares de hojuelas lanceoladas al revés ú ob-aovado-lanceoladas, retusas, de ordinario mucronaditas, largas de 6-10"' y de cara inferior pubescentita ; estípulas lanceo- lado-setáceas; racimos terminales ú opuestos á las hojas, de flores 2-3 juntas y por fin distantes, largas de 4'", con la corola purpurino- pálida; lóbulos del cáliz subulados, sub-iguales. dosveces mas corto que el estandarte sedoso, quilla horizontalmente encorvada; estilo lampiño, con estigma cabezudo, lampiño ó con algún pelo; legum- bre continua pubescente, estendida y con 5-8 semillas. T. leptosta- chia, De. T. asce}ide)is, Macf. 3. Mata fruticosa de 4-5' de alto, con tallo derecho, asurcado y aterciopelado, de hojas con 10-20 pares de hojuelas oblongc-linea- res, pecioladas, sedoso-pubescentes, especialmente por la cara in- ferior, largas de 1 1[2 á 2"; estípulas subulado-sedosas; racimos terminales y axilares elongados, con algunas flores azules, de pedi- celos fasciculados, de cáliz con lóbulos aovados, cuyos dos superio- res son mas cortos; estandarte sedoso : estilo pubescente ; legumbre continua pubescente, larga de 2". T. toxicaría , Pers. T. schiecleana, Schle. Galega toxicaria, Sw. : C. T. Y., 410. — Mata fruticulosa, difusa, alta de 1' á 1' 1|2 inclinada y peludo-pubescente, de hojas con 4-7 pares de hojuelas lanceoladas al revés y largas de 6-12'"; estípulas subuladas ó lanceolado-cerdáceas, racimos opuestos á las hojas, de flores mellizas ó solitarias, largas de 5-6'", rosadas, de cá- liz con lóbulos subulados, sub-iguales, tres veces mas corto que el estandarte sedoso; estilo lampiño, con estigma largamente pesta- ñoso; legumbre continua, pubescente, estendida y con 5-10 semillas. 302 DIVISIÓN tíEÜU.XDA. FA^' EROGAMOS. T. cinérea, Pers. T. procumhens, Macf.-Var. T. littoraUs, Pers. : C. T. Y.,410. G. III. Agati gra7idiflora, Desr.: C. T. V. 11(5. Sul-fcimüia 2. — CÉSALPINJ^AS. — Cáliz con o divisiones, reunidas entre sí mas ó menos, de prefloracion empizarrada ó val- var, frecuentemente hendido bástala base; corola con igual nú- mero de pétalos, algunas raras veces menos y que suelen faltar alguna vez que otra, de prefloracion empizarrada; flores no papilio- náceas y cuyo pétalo reemplazando la quilla está en la parte interior del capullo; estambres frecuentemente no simétricos con las demás partes de la flor ó muy desiguales entre sí, ora muy numerosos, ora pocos por causa de aborto, raras veces regulares, con mayor fre- cuencia libres ó algo soldados por la base. Ovario sostenido por un ginóforo, ó por partes soldado con el cáliz. Legumbre con tabiques ó sin ellos, con pulpa en su interior ó sin ella, conteniendo cada celda una ó dos semillas sin endospermo , cuyo embriones de ordinario recto. Análisis dicotómica de las trihis. 1. Cáliz campanudo ó tubuloso, 2. — Cáliz ni campanudo ni tu- buloso, 8. 2. Cáliz campanudo, 3. — Cáliz tubuloso -inferiormente y persis- tente, 4. 3. Regular y con 5 dientes ; corola de 5 pétalos casi iguales ; 5 estambres fértiles, casi iguales, alternando con otros tantos estéri- les; hojas desnudas ó dos veces pinadas, T. I. Di-MORfondreas. Ce- ratonia. — Por lo regular campanudo 5-fido ; corola de 5 pétalos algo desiguales, inclinados ó diverjentes; sosten del ovario ó ginó- foro libre. Hojas una sola vez pinadas con ó sin impar, cuyas hejue- las tienen tendencia á volverse alternas. T. II. Leptolobieas. G. I. Hermatoxtlon cami^ecMamim , L.: C. T. Y., 112. G. II. Parkin- soNiA aculeata, L.: C. T. V., "768. 4. Con 4 ó 5 divisiones cóncavas, empizarradas^ dobladas hacia dentro de la flor ó deciduas; 5 pétalos que á veces se quedan redu- cidos á uno solo ; 10 estambres, á veces mas, otras veces menos, siendo algunos de ellos ó todos muy largos y doblados dentro del capullo ; ginóforo con mayor frecuencia soldado por un solo lado con el tubo calizinal ; hojas pari ó imparipinadas. T. III. Amhestieas. G. I. Tamarindus indica, L.: C. T. V., 614-520. G. IL Hime- NOEA conrbaril, L.: C. T. Y., 444. — Divisiones calizinales tan pronto cortas y dentiformes como elongadas y valvares ; 5 pétalos ; 10 estambres por lo menos; ginóforo libre ó soldado; hojas com- puestas de un solo par de hojuelas distintas ó soldadas entre sí por los bordes correspondientes y rarísima vez reducidos á una sola hojuela. T. lY. Bauhinieas. A. 5. Estambres siempre definidos, 6. — Estambres indefinidos mas ó menos numerosos, muy desiguales y que no se parecen entre sí, insertos junto con los pétalos en el disco ó distintos, y mas rai*a vez pegados en el cáliz, de dehiscencia valvar, rompiéndose irregular- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVI. — LEGUMINOSAS. 303 mente o hendido haíita la base en 4 ó 5 lóbulos, casi iguales; pétalos o ó en número menor y á veces reducidos á uno único, otras veces faltan enteramente. T. V. Swartzieas. — vÍ^'artzia tomentosa, L. 6. Estambres 10, ó en número menor, 7. — Siempre 10 estam- bres fértiles apenas inclinados ; ginóforo libre; cáliz 5-fido, ó mas ú menudo 5-partido ; corola de 5 pétalos algo desiguales; hojas pi- pinadas. T. VI. Eucesalpíneas. B. 7. Estambres 10 ó en número menor por causa de aborto de algu- nos que se quedan desformados ó faltan enteramente, desiguales, cuyas anteras menores, oblongas y cuadrangulares se abren por po- ros situados en su ápice ó mas raras veces hacia la base ; hojas pi- nadas sin impar ó mas rara vez cuyas hojuelas alternan un poco con la impar terminal. Legumbre con pulpa en su interior ó sin ella. T.V.Casieas,C. — Estambres 10 ó en número menor, iguales ó des- iguales ; ginó foro libre y muy corto ; ovarip con un solo óvulo ó algu- nas veces con dos; legumbre indehiscente; cáliz con 4-5 divisiones profundas, empizarradas, reñejas durante la floración; 4-5 pétalos casi iguales, los cuales faltan aveces; hojas con uno ó con algunos pa- res de hojuelas que tienden ávolverse alternas, con impar ó sin él. T. VIL CiNO-METREAS. — CoPAiFERA of/lcv/iaUs, Jacq.i C. T. V., 771. A.G. I.Bauhinia, L. 1. Vejetales aguijonosos, 2. — Árbol bajito muy ramoso, inerme, cuyas ramas alampiñadas llevan en sus rami- tas hojas sub-acorazonadas, redondeaditas, lobadas hasta el 1{3, 9- nervias, lampiñas, con las nervaduras alampiñadas inferiormente, cuyos lóbulos anchamente aovados son redondeadito-obtusos y pa- ralelos, anchas de 5 á 3" l\2, con el peciolo de Y'-ñ'". Flores solita- rias ó las superiores racimosas blancas, largas de 3 á 4", de ordina- rio opuestas á las hojas, con los pedicelos espesitos y de 4-6'" de largo; de cáliz largo, esteriormente tomentoso y color de orin, es- patiforme, con el vértice entero, cuyo limljo es casi tan largo como los pétalos lineares y como los estambres distintos, de anteras elon- gadas y lineares; estigma infundibuliforme bi-lamelado, aovado- oblongo y unilateral. B. megalaudra, Gr. 2. Arbusto de como 10 á 15' de alto, muy ramoso, con espinas estipulares y cuyas ramitas pubescentitas llevan hojas redondeadito- sub-cuadraclas,'bílobas hasta el 1^3 ó la 1^2 de su lonjitud, sub-aco- razonadas por la base, 11-9-nervias, pubescentitas inferiormente, de lóbulos un poco diverjentes, aovado-deltoídeos y con una punta obtusita, anchos de 1 1^2-1"; flores blancas mellizas ó solitarias, de cáliz pubescente esteriormente espatiforme, con el vértice entero, con el tubo largo de 4'" y el limbo de 9 á 10'" ; pétalos espatulado- oblongos, retusos, aguzándose en uña corta, lampiños, largos de i" l[2á2"; estambres todos fértiles, de los cuales 9 están reunidos por la base, con anteras lineares recorvadas ; estigma infundibuli- forme lanceolado, desigualmente lobado y obtuso. B. íingida. B. aculeata, Jacq. B. piihescens, De. B. aciiminata, Desc. — Arbusto del tamaño y altura del anterior, con estípulas espinosas pero no fuertes, ramitas pubescentitas con hojas redondeaditas, bílobas hasta el 1{3^ truncas por la base, 9-nervias, pubescentitas inferior- 304 DIVISIÓN SECrUNDA. FAÍsEKOCtAMUS. mente, cuyos lóbulos anchamente aovados son redondeado-obtusos y paralelos, anchas de 2" ; pedúnculos bífidos con dos flores rosado- blancas, acompañadas de bracteitas lineares y persistentes, de cáliz pubescentito esteriormente, espatiforme ó entero, diminutamente denticulado por el vértice, pétalos anchamente ob-aovados, redon- deados por el ápice, subsesiles, lampiños, tres veces tan largos como el limbo del cáliz; largos de 1" \\2 á 2" sobre 15 á 18'" de ancho, teniendo uno de ellos una mancha purpurina por la base; estambres o-l fértiles, sub-distintos por la ])ase pestañosa, inclusos, de ante- ras oblongo-lineares recorvadas; estigma infundibuliforme lanceo- lado, desigualmente bílobo, labio mayor arriñonado ; ginóforo muy corto. B. variegata, L.: C. T. V., 848. G. II. ScHNELLA, Radd. Arbusto sarmentoso con hojas cuyas dos hojuelas son distintas, semi-aovadas, aguzadas ó puntiagudas, sub- semi-acorazonadas por la base, paralelas, 3-4:-nervias, de cara su- perior lampiña y lustrosa, mientras la inferior pubescente es como sedoso-dorada, largas como de 8-4", con el peciolo de 6-3"; lóbulos del cáliz obtusos, pétalos velludos esteriormente desiguales, cuyo mas largo es ob-aovado y dos veces mas largos que el cáliz; pedice- los largos de Y'\ con flores de 5 á 6'". S, splenclens, Benth. B. splendens, Ktli. B. outimoíito7i , Aubl. B. rnoxrojjftylla, Poir. B. riparia, Split. — Arbusto cuyos tallos comprimidos larguísimos pa- recen una cadena, cuyas ramitas alampiñadas están provistas de especies de zarcillos un poco color de orin. son pubescentitas cuando tiernas yllevan hojas acorazonado-redí^ndeaditas un pocobílo1)as por el vértice, hasta el 1|3 ó IjlO solamente, 9-11-nervias, con los ló- bulos paralelos, deltoídeos, aguzados, obtusitos, anchas de 4-3". coriáceas , de cara superior lampiña , mientras la inferior color de orin es pubescentita sobre las nervaduras bastante proeminentes, con peciolo largo de 2-1" ; flores blancas en racimos elongados. terminales, olorosas y largas de 6"', con el pedicelo de 2"', de cáliz cuyos labios son diminutamente dentaditos; pétalos ob-aovado- oblongos, velludos esteriorm.ente y por fin alampiñados, escepto la parte mediana, dos veces tan largos como el cáliz. S. excisa. Gr.: C. T. Y.,816. G. III. Brovvnea, Jacq. 1. Hojas con 6 ó menor número de pares de hojuelas; árboles bajitos de 20 á 25' de altura, 2. — Hojas con 12 pa- res de hojuelas; árbol de como 60' de altura, coposo y corpulento ; hojuelas cortamente pecioladas, alternas, lanceolado-oblongas, lar- gamente cuspidado-aguzadas, iguales, redondeaditas y apenas aco- razonadas por la base, entejérrimas, membranosas, reticulado-ve- nosas, lampiñas, mas pálidas y con las nervaduras proeminentes inferiormente, largas de 4" 1|2 sobre 14-16"' de ancho, las inferio- res son nienores y de 2" lj2-3" de largo, con el raquis casi cilín- drico-tomentoso-aleonadito. Flores muy numerosísimas mas de 100 en espigas aovado-racimosas, largas de 2" y mas, con pedicelos de ll2", pelierizados y bibracteados por el ápice, mientras la base está ceñida jjor brácteas ; calículo turbinado, campanudo, comprimido, tetrágono, pelierizado-tomentoso y aleonadito; cáliz de tubo elon- gado, anguloso, alampiñado esteriormente é interiormente pelieri- DICOTILEDÓNEOS. CLASE LVí. LEGUMINOSAS. 305 zadito, articulado v deciduo, de limbo 4-partido. Pétalos espatula- dos, larguísimamente unguiculados: estambres 11, cuyos alternos mas largos esceden la corola. B. grandipes, Kth. 2. Estambres 11, cortamente esertos ó sub-inclusos; calículo velludo tan largo como el tubo del cáliz, cuyos lóbulos son como mitad tan largos como el tubo y los pétalos, 3. — 10 estambres casi dos veces tan largos como los pétalos; liojas de 4-3 pares de hojue- las lanceolado-oblongas ó eliptical-oblongas, cuspidadas, sub-agu- dos por la base, largas de 4"-2" sobre 2-1 1{2" de ancho : flores fasciculadas, calículo velludo y escediendo el tubo del cáliz cuvos lóbulos son 2-3 veces mas cortos que el tubo y que los pétalos, lar- gas de 2", con pedicelos de 3'". B. speciosa, Rchb. 3. Estambres sub-inclusos ó 1-2'" mas largos que los pétalos, mucronados ó igualándoles ; hojas con 6-2-1 pares de hojuelas elíp- ticas ó eliptical-oblongas, cuspidadas, redondeadas ó sub-acorazo- nadas por la base, lustrosas, largas de 1-4" sobre 2 112-3" de ancho; flores fasciculadas, largas de 2", con los pedicelos de 3'". B. latifo- lia, Jacq. — Estambres cortamente esertos y 4'" mas largos que los pétalos; hojas con 2-4 pares de hojuelas eliptical-oblongas, cuspi- dadas, redondeadas por la base ; flores fasciculadas en la sumidad de las ramas y colgantes. B. rosa, Berg. B. coccínea, Loefl. : C T. V., 515. B. G. I. CcESALPiNiA, L. 1. Legumbre seca, con dos val/as y algu- nas semillas ; flores en racimos simples, 2. — Legumbre como aba- yada, indehiscente, hinchado-comprimida, con pocas semillas : flo- res amarillas en racimos compuestos dispuestos ; arbusto que se eleva á 15 ó 20' de altura y se vuelve árbol bajito aguijonoso ó iner- me algunas veces, lampiño con hojas 2-3 pinadas con 2-1 pares de hojuelas, al revés deltoídeo-redondeaditas ú oblicuamente romboi- deas, lijeramente retusas, con puntos transparentes, largas de 12- 9"' sobre 10 á 8'" de ancho ; pedicelos articulados por debajo del ápice ; pétalos largos de 4-5'" y un poco mas que los segmentos mas cortos del cáliz y tanto como los órganos sexuales ; filamentos y ovario velludos; estigma espesito; legumbre suculenta, negra, rec- ta, sentada con las impresiones transversales de los falsos tabiques, hinchada por las márjenes, obtusita por el ápice, larga de 2 á 1" sobre 6'" de ancho y espesa de 3 á 2'", con 1-3 semillas lustrosas y brunas, comprimido-globosas y de 4"' de diámetro. C. Mjuga, S\v. C. ventricosa, L. C. glandulosa, Bert. Poinciana hejuga, L. Acacia lancfortiana, Bert.: C. T. V., 49. 2. Arbusto de como 8 á 10' de alto, con ramos difusos ó como sarmentosos, aguijonosos y pubescentes por la sumidad, de hojas 6- 10-4-pinadas con 8-12 pares de hojuelas oblongo-redondeadas ó sub-truncas por el ápice, de cara inferior pubescentita ó alampiña- da, largas de 6 á 5'" sobre 2'" de ancho; estipulas semi-asaetadasy deciduas; pedicelos muy largos articulados por debajo del ápice; pétalos de 6'" y mas largos que el cáliz ; filamentos cortamente esertos, velludos por la base, estigma espesito, leguml)re alampi- ñada oblicua y largamente cuspidada, sentada, comprimida y llana, por fin algo hinchada, redondeada por ambos estreñios, larga de 2 TOMO II 20 306 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 1\2 Á 2" sobre 10 á 8" de ancho, con 6-8 semillas ovoideas, pinta- dito-negras, largas de 4"'. C. separia, Roxl». C. hórrida, Rich.: C. T. V., 49. — Arbusto que se vuelve con frecuencia arbolito aguijonoso, lampiño, de hojas con 1-4-5 pares de pínulas, con 3-5- 9 pares de hojuelas cada una, ob-aovadas ú oblongas, retusas ó re- dondeadas por el ápice, largas de 12-5-18''' sobre 5-2 li2-12"' de ancho ; flores blancuzcas en racimos terminales , cuyos pedicelos largos son articulados por debajo del ápice, de cáliz cuyo segmento impar dos veces tan largo como los demás y reflejo es algo mas largo que el tubo, que lo es de 3"^ ; pétalos mas cortos que el cáliz; órganos sexuales 2-3 veces tan largos como el cáliz que tiene V" ; filamentos escamosos inferiormente : estigma espesito ; legumbre llana, comprimida, lampiña, oblicuamente aguzada y con figura de cimitarra por el vértice, continua interiormente, larga de 3" y an- cha de 5'", cortamente estipitada, de 2'" nada mas, con 7-10 semi- llas sub-cuadradas, comprimidas y de 3'" de diámetro. Corista, L. C. haJio.mensis, Lam.: C. T. Y.,. 49. G. II. GuiL ANDINA, L, Hojas pubescentitas ó alampiñadas con ho- juelas ovales ó aovadas, obtusas, muy desiguales por la base, largas de 8 á 12'" y anchas de 6 á 8'" ; estípulas abortivas ; brácteas tan largas como el pedicelo ; semillas amarillas. Ci. honduc , L. Cr.mi- crophylla, De: C. T. Y., 50. — Hojuelas pubescentitas ó alampi- ñadas oval-oblongas , ovales ó aovadas,, obtusas, sub-acorazonadas por la base casi igual, largas de 18'" y anchas de 8-10'" ; estipulas partidas en segmentos grandes, brácteas recorvadas y mas largas que los pedicelos : semillas de color aplomado. Ct. honducella, L. Gf. londuc, And.: C. T. Y., 111. G. lll.Voií!iCiA.-^Kpulcherrifiia,'L..'. C. T. Y., 33*7.G.lY.LiBn)iBiA coriaria, Schle.: C. T. Y., 120. G. Y. Peltophoeum Linnm, Benth^ Coesalpiiiia hrasiliensis, L. C. jamaica^ Sw.; C. T. Y., 49. C. G. I. Casia. 1. Estambres 7 fértiles, mientras los demás abor- tados son estériles, 13. Estambres 5-10 todos fértiles, cuyas ante- ras lineares se revientan por el ápice á favor de dos grietas corti- taá, pubescentitas á lo largo de un surco cerrado por debajo de ellas; legumbre plano-comprimida, bivalvar, con semillas comprimidas y paralelas á las valvas, podospermo deltoideo ; pedicelos diminutos y con bracteitas diminutas, 2. 2. De inflorescencia terminal ; podospermo escamiforme , 3. — De inflorescencia nunca terminal, pero cuyos pedúnculos son axi- lares ó supra-axilares: podospermo escamiforme, 4. 4. Mata fruticulosa y anual, de tallo derecho, cilindrico, de ra- mitas con pelo glanduloso, que llevan hojas biyugadas, cuyas hojue- las son obovales, obtusísimas, alampiñadas, sin puntitos y largas de 12 á 8'" ; raquis con glandulitas situadas entre las pares ; estípulas lanceoladas y cerdosas ; racimos terminales, acompañados de flores accesorias y axilares, con pocas flores pediceladas, de sépalos largos de 2"'; legumbre larga de 1", glanduloso-peluda, con lineas oblicuas correspondiendo á los tabiques. C. aisus, L. C. viscosa, Macf. 4. Frútices ó matas fruticulosas, vivaces, 8. — Yejetales herbá- ceos ó fruticulosos anuales, 5. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVl. LEGUMINOSAS. 307 5.. Sub-frutices de hojas con un solo par de hojuelas, 6. — Hojas con 10 á 25 pares de hojuelas, 7. 6. Lampiño, hojuelas oblicuamente semi-orbiculares ó semi-ob- aovadas, con las nervaduras dispuestas á manera de abanico y las venas escurridas, largas de 10 á Q"' ; estípulas acorazonado-subula- das mas largas que el raquis glanduloso ; pedúnculos solitarios uni- floros j mas largos que las hojas; sépalos largos de 3'" estriados por algunas nervaduras y escariosos ; legumbre con pelo largo, es- parcido y densamente pubescente, larga de 1 1[2 á I", con semillas oblongas y oblicuas por la márjen. C, clipliylla, L. — Peludo; ho- juelas semi-ovales ú oblicuamente semi-orbiculares, reticulado-ve- nosas y largas de 9-4'" ; estipulas oblicuamente acorazonado-subu- ladas tan largas ó mas largas que el raquis sin glándulas ; pedúnculos solitarios unifloros y mas largos que las hojas: sépalos foliáceos, largos de %'" ; legumbre pubescentita con pelo corto y larga de 12 á 8'". C. rotundi folia, Pers. C. hifoliolata, De. 7. Planta herbácea ó fruticulosa, pubescente con pelo corvo, ó alampiñada, de hojas con 5-12-25 pares de hojuelas oblongo-linea- res, mucronaditas, lijeramente oblicuas por la base, peninervias, estriadas á causa de sus venas, y largas de 5 á '%'" ; raquis con una glándula estipitada situada por debajo del par mas inferior; estipu- las aguzadas desde la base oblicuo-lanceolada y escediendo el punto de inserción de la glándula ; pedúnculo con 1 ó á veces 3 flores, mu- cho mas cortas que las hojas; estambres 5-7-10; legumbre con pelo esparcido y corvo. C. nictitans, L. C. cliamacrista, Sw. C. mscliy- nomem. De. C. smaragdina, Macf.: C. T. V., 519. — Mata velludo- pubescente, alta de 1 á 2', de hojas con 10-25 pares de hojuelas oblongo-lineares, mucronaditas, oblicuas por la base, peninervias, estriadas á causa de sus venas largas de 5 á 3"'; raquis con una glándula sésil y escutiforme , situada por debajo del par mas infe- rior; estipulas subuladas y escediendo la inserción de la glándula • pedúnculos largos de 4-3'"', ordinariamente distantes de la axila, en número de 1-3, muy cortos y con 1-3 flores, con los pétalos in- clusos y 7-8 estambres ; legumbre larga de li2" á 1" 1|2, velluda con pelo esparcido. C. patellaria, Dg. 8. Raquis con una ó con algunas glándulas, 9. — Raquis sin glán- dula ninguna; mata peluda con hojas de 3 á 5 pares de hojuelas oblongas mucronadas, oblicuas por la base, alampiñado-pestañosas y largas de 8 á 4'"; estipulas semi-subuladas; 1-3 pedúnculos 1 flores casi tan largos como las hojas ; legumbre pubescente larga de 18 á 10'". C. pilosa, L. 9. Una sola glándula situada por debajo del par mas inferior, 10. — Tantas glándulas situadas por debajo de cada par cuantos pares de hojuelas hay ; frútice ó arbustillo cuyas ramas lijeramente pu- bescentitas llevan hojas con 8-4 pares de hojuelas, lampiñas, ob- aovado-oblongas, oblicuas por la base redondeada, largas de 12-4'" y anchas de 4-2"', mucronadito-obtusas ó retuso-truncas por el ápice, peninervias, estriadas por causa de sus venas, glándulas pe- ciolares subsesiles ó estipitadas;. estipulas aguzadas desde la Ijase lanceolada; 1-2 pedúnculos 1-floros y mas cortos que las hojas * 308 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. estambres 10 ; legumbre con pelo esparcido y corvo, larg-a de 1" 1[2 á I". C. polyadena, l)c. 10. Pubescentes ó alampiñados, II. — Tan pronto alampiñado como peludo, ese vejetal fruticoso ó fruticuloso es alto de 2-5-6', cuyos ramos llevan hojas con 10-18-5 pares de hojuelas oblong-o- lineares mucronaditas,lijeramente oblicuas por la base,peninervias, estriadas á causa de sus venas, largas de 3 á 10'" ; raquis con una glándula estipitada situada por debajo del par de hojuelas mas infe- rior y algunas veces también debajo de los pares superiores; estípu- las cortas y subuladas; 1-3 pedúnculos con 1 sola flor é iguales ó dos veces mas largos que ella, mucho mas cortos que las hojas ; es- tam^bres 10, con filamentos muy cortos; legumbre con pelo espar- cido y corvo, larga de 1-2". C. glanclulosa, L. C . cliamcBclirista ca- ribeña, L. — De la cual hay dos variedades : la 1» de tallo con forma de varita, sim^ile inferiormente y alampiñado; glándula peciolar solitaria, ó pocas, cortamente estipitada. C. stricta, Schrk., Y la 2* de tallo difuso, cuyos ramos, peciolos y frecuentemente las ho- juelas son peludos; glándulas peciolares largamente estipitadas. C. ramosa. C. virgata, Sw. C . Sioartzii, Wickstr. 11. Siempre pubescentes, 12. — Alampiñado ó por fin lampiño ó lustroso el tallo fruticuloso y con forma de varita de esa mata alta de 2-3', lleva hojas con 20-30 pares de hojuelas oblongo-lineares, mucronadito-obtusas, inequilaterales, peninervias con venas dis- tantes lampiñas y largas de 6-4'" ; raquis con una sola glándula turbinado-cilíndrica situada por debajo del par de hojuelas mas in- ferior; estípulas subuladas; pedúnculos distantes de la axila muy cortos, de 3 á 4'" de largo solamente; legumbre alampiñada larga de 2" y con una ala estrecha situada por su márjen. C . pretexta, Vog. 12. Mata herbácea ó fruticulosa, de tallo delicado, pubescente, de hojas con 4-9 pares de hojuelas, inequilaterales, oblongo-lineares ú ob-aovado-lineares, mucronaditas, alampiñadas, largas de 3 á V" 1|2, venosas inferiormente; raquis con una glándula estipitada si- tuada por debajo de los pares: estípulas semi-subuladas; pedúnculos simples casi tan largos como las hojas, con una sola ñor cuyos péta- los son largos de 4-5'" ; legumbre peluda con pelo esparcido y larga de 12-8'". C. serpens, L. C. ¡^i'ostrata, Kth. C. pygmcBa, Macf. C. difusa, Salzm. — Arbusto de 8' ó mata fruticulosa de 3' de alto, pubescente con pelito corvo, de hojas con 6-2 pares de hojuelas in- equilaterales ob-ao vado-oblongas, redondeadas ó sub-truncas por el vértice, mucronadas, peninervias y de venas escurridas, de cara superior por fin alampiñada, largas de 5-3'" : raquis con una glán- dula sésil y deprimida situada por debajo de los pares que une ; es- típulas aguzadas desde la base lanceolada; pedúnculos solitarios, casi tan largos como las hojas, con una sola flor cuyos pétalos son largos de 6'" ; 10 estambres ; legumbre pubescente con pelo espar- cido y corvo, larga de 3-1". C. lineata, Sw. C . cuneata, I)c. 13. Legumbre sin alas siempre, 14. — Legumbre tetragonal con alas alo largo de la parte medmna de las valvas, dehiscente y con ■algunas celdas, de semillas paralelas á los tabiques; estambres fér- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVl. — LEGUMINOSAS. 309 tiles 7-6-5. Primoroso arbustito bastante ramoso que se eleva á 6- KV de altura, cuyas hojas grandes están formadas de 6-14 pares de hojuelas desiguales grandes, oblongas, subsesiles por la base sub- trunca, redondeadas ó retusas por el vértice, alampiñadas, par infe- rior cerrado por el nudo v distante del mas vecino, largas de 5-2" el par superior siendo mayor que los demás y el inferior el menor de todos ; raquis triangular sin glándulas : flores amarillas en espiga terminal, larga de 6-8", con grandes brácteas amarillas y deciduas, cuyos pétalos grandes están lacerados por la márjen ; legumbre mu- cronada con los bordes marjinales enteros v las alas festoneaditas, larga de 5". C. alata, L.: C T. V., 383.^ 14. Cilindrica mas ó menos ó casi así, leñosa ó coriácea, con al- gunas celdas, á veces llenas de pulpa, cuyas semillas comprimidas son paralelas á los tabiques ; anteras oblongas bi-porosas por el ápi- ce ; vejetales siempre leñosos, 15. — Nunca ó rara vez sub-cilín- drica, pero sí mas ó menos comprimida y plana, 19. 15. Mas ó menos dehiscente y nunca verrugosa, 16. — Indehis- cente, sub-comprimida y cilindrica á la par, verrugosa, lampiña y con una punta. Arbolito alampiñado, de hojas con 2 pares de ho- juelas semi-aovadas, con una punta, largas de 5-2" ; raquis con una glándula cónica situada entre el par mas inferior ; racimos axilares ó formando colimbos flojos, cuyos pedicelos largos y abiertos no tienen brácteas, con pocas flores de pétalos largos de 10"' ; legumbre larga de 8-10" y con semillas horizontales. C. hacillaris, L. 16. Vejetales rastreros ó sarmentosos, cuya legumbre coriácea y sub-cilíndrica se abre á lo largo de las suturas, Yl. — Vejetales no sarmentosos; legumbre sub-cilíndrica y obtusa, coriácea y abrién- dose también á lo largo de las suturas, 18. . 17. Arbusto como trepador ó abejucado y bastante alto, alampi- ñado con hojas de 2 pares de hojuelas eliptical-oblongas lijeramente inequilaterales, con una punta, de cara superior lustrosa, largas de 3" 1|2 á 2"; raquis con una glándula cilindrica entre los dos pares mas inferiores ó una sola y un tubérculo dorsal por la base ; estípu- las falciformes , cerdosas, sub-punzantes ó lanceoladas ; racimos axilares corimbiformes, con brácteas deciduas ; legumbre con un piquito, torulosa, transversal mente venosa, lampiña, larga de 4- 6-2", con semillas horizontales. C. viminea, L. C. 'melaiiocarpa, Bert. C. undulata^ Benth. — Arbustito algo rastrero no muy alto, lampiño, de hojas con 2-3-4 pares de hojuelas ob-aovadas ú oval- redondeadas, de ápice redondeado, largas de 16-10'"; raquis con una glándula entre el par mas inferior; racimos tan largos como las hojas, con pedicelos cortos y bracteolados, axilares y con pocas flo- res, cuyos sépalos son largos de 4"' y los pétal< s de 6"' ; legumbre lampiña con un tabique lonjitudinal incompleto, larga de 8-3"', con semillas horizontales. C. hicapsularis, L.: C. T. V. 517. 18. Arbustito lampiño, de hojas con 3-4 pares de hojuelas aova- do-oblongas ó aovado-lanceoladas, aguzadas y largas de 3 á 2" ; raquis con una glándula entre cada par ; racimos axilares mas cor- tos que las hojas y terminales; brácteas deciduas; pedicelos tan largos como las flores, cuyos sépalos son largos de 4"' y los pétalos 310 DIVISIOIS' SEGUNDA. FANERÓGAMOS. de 6-8'"; legumbre lampiña, transversalmente rugosita y larga ele 3-2". C. lavigata, W. — Arbustillo tomentoso-pubescente, de ho- jas con 6-8, á veces 2 pares de hojuelas oblongas ó lanceolado- oblongas, redondeadas ú obtusitas por el ápice, de cara superior pubescente, mientras la inferior es tomentosa, y largas de 18-9'", raquis con glándulas entre todos ó solamente algunos pares; raci- mos axilares, cuyo terminal es corimbiforme , con flores cuyos sé- palos son largos de 6"' y los pétalos de 10-12'" : legumbre tomen- tosa y pubescente. C. tomentosa, L. 19. Siempre comprimida, 21. — Membranáceo- comprimid a, pero por fin biconvexa ó subcilíndrica, bivalvar, sin pulpa y con algunas celdas, monospermas, cuya semilla comprimida es por fin paralela á los tabiques, 20. 20. Frútice ó mata fruticulosa pubescente, cujeas ramas obtusa- mente angulosas llevan hojas con 4-6 pares de hojuelas elípticas ó eliptical-oblongas, aguzadas y largas de 1-2" 1^2 ; raquis con una glándula cilindrica por encima de la base; racimos cortos, con po- cas flores, cuyos sépalos son largos de 3-4'" y los pétalos de 6-8'" : legumbre linear-pubescente, no torulosa, por fin sub-comprimido- bi-convexa, larga de 5", cuya última es arqueada ó rectita. C . liir- suta, L. C . caracasana^ Jacq. C . venenífera, Rodrch. — Mata anual ó fruticulosa derecha, alta de 2' á 4', no.muy ramosa, alampiñada ó pubescentita, de hojas con 4-8 y á veces 12 pares de hojuelas aovado- lanceoladas, aguzadas, largas de 2--1" sobre 15-8'"; ra- quis con una glándula ovoidea hacia la base ; racimos cortos^ de pedicelos bracteolados, con pocas flores amarillas, cuyos sépalos son largos de 2-3'"' y los pétalos de 6'"; legumbre lampiña, oblongo-li- near, marjenada, comprimida, y por fin biconvexo-sub-cilíndrica, larga de 4-2", un poco arqueadita. C . occidentalis, L.: C. T. V., 307'. 21. Llana y comprimida, pero sin ser tetrágona, 23. — Compri- mida y tetrágona, linear, con semillas comprimidas y paralelas á las valvas y cuyo mas largo diámetro es también paralelo con ellas ; estípulas largas, lineares y cerdosas, 22. 22. Mata anual, alta de l'-2", fruticulosa y alampiñada, con ho- jas de 2-3 pares de hojuelas ob-aovadas, mucronadito-obtusas, cu- neiformes por la base y largas de 12-6"' ; raquis con glándulas ci- lindricas entre los 2 pares inferiores ó el mas inferior solamente ; pedúnculos con pocas flores, cuyos sépalos son largos de 2-3'" y los pétalos de 6"': legumbre papirácea, lampiña, lisa, aguzada, con las márjenes crecidas, larga de 5-3" y cuya última es arqueada ó rec- tita. C. oI)tusifoUa,L. C. tora, L. — Planta anual fruticulosa que se eleva de 6" á 3' de altura, pelierizada y color de orin, cuyas cer- das son acostadas á lo largo de sus ramitas, peciolos y las márjenes; hojuelas 4-2 yugadas, ob-aovadas, mucronadito-obtusas, redondea- das por la base y sub-pelierizadas inferiormente, largas de 18-8"' ; raquis con glándulas subuladas y estipitadas entre la mayor parte de los pares ; pedúnculos cortos, axilares ypaucífloros; legumbre papirácea, pelierizada y color de orin ó alampiñada, biconvexa, sub-tetrágona, profundamente estirada, transversalmente y según los tabiques, con las márjenes filiformes enteras, lijeramente ar- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LYI. — LEGUMINOSAS. 311 queada j larg-a de 2-1", con semillas oblongas y troncas. C. peri- cea, Sw/C. T. V., 519. 23. BÍTalvar, con semillas comprimidas paralelas á las valvas, j cuyo mas largo diámetro es transverso á ellas, 24. — Indeliiscente y con proeminencias correspondiendo á las semillas ob-acorazona- das, mas cortas que su podospermo, comprimidas, paralelas á las valvas y con su mas largo diámetro transverso á ellas ; mata fruti- culosa, difusa, lampiña, de hojas con 4-7 pares de hojuelas ob-ao- vadas y largas de 8-12"^ ; raquis sin glándulas ; estípulas lanceola- das, aguzadas y persistentes; racimos axilares, paucífloros, con pedicelos sin brácteas; legumbre arqueada, anchamente oblonga, con una cresta correspondiente á las semillas, lampiña, larga de 1" 1^2 y ancha de 8'". C. ohovata, Coll. C. senna, Sw.: C. T. Y., 518. 24. Raquis sin glándulas, árboles ó arbustos, 28. — Raquis con glándulas, 25. 25. Situadas entre las hojuelas, 26. — Situada por encima de la base del raquis y oblonga; arbustillo alampiñado, de hojas con 5-8 pares de hojuelas lanceoladas ú oblongo-lanceoladas, aguzadas, in- equilaterales, de ordinario pestañosas y largas de 2 1|2-1"; racimos dispuestos en corimbos terminales, con flores cuyos sépalos son lar- gos de 3-4'", y los pétalos de 6-8"'; legumbre membranosa, linear, lijeramente arqueada, lampiña subsesil y larga de 6-4". C. ligiis- toina, L. C. hahamensis, Mili.: C.T.Y., 518. 26. Hojas con 4 hasta 10 pares de hojuelas, 21. — Hojas con 10- 24-30 pares de hojuelas oblongas, mucronadito-obtusas, alampiña- das interiormente y largas de 12-6"' ; raquis con una glándula cilin- drica entre el par mas inferior ; racimos terminales dispuestos en panojas corimbiformes, cuyas hermosas flores amarillas tienen sé- palos largos de 3-4"' y pétalos de 4-8'" ; legumbre membranosa, anchamente oblongo-linear, rectita, lampiña, con líneas transver- sas, redondeada por la base, estipitada , larga de 4", con la última ancha de 10"'; semillas oblongas. C.muUijug a, B.ich. C. caíliantha, Mey. C. selloi, Don. C. magnifica, Mart. C. ampliflora^ Steud. C. fulgens, AVall. 27. Arbusto ó árbol bajito, de hojas con 4-6 pares de hojuelas oval-oblongas ú ovales, con una punta obtusa, de cara inferior glauca y pubescentita ó alampiñada, largas de 3-1"; raquis con una glándula ovoidea entre cada par de los mas inferiores; estípulas falciformes y lineares; racimos axilares corimbiformes peduncula- dos, cuyos pedicelos bracteolados llevan flores grandes , cuyos sé- palos son largos de 3-4'" y los pétalos de 12-15'"; legumbre mem- branosa, oblongo-linear, recta, lampiña, transversalmente estriada según los tabiques, de repente estipitada, larga de 5", con su ginó- foro de \"-\" lf2, semillas oblongas. C. glauca, Lam. C . pinmieri. De. C. pla7iisüiqua, Lam. C . arborescens,Y. C. sulfúrea, De. C. discolor, Desv. — Frútice pubescentito ó alampiñado, de hojas con 4-8-10 pares de hojuelas ob-aovado-oblongas, mucronadito-obtusas, largas de 8-4'" ; raquis con una glándula cilindrica entre el par mas inferior; pedúnculos con 2-4-6 flores cuyos sépalos son largos de 3-4'" y los pétalos de 6-8'" . legumbre membranosa, oblongo-linear 312 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. Ó linear, lijeramente arqueada, algo peluda, obtusa, redondeada por la base, efctipitada y larga de 3-1" 1|2. C. biflora, L. C. longissi- liqua, L. hijo : C. T. V., 518. — Variedades : con las hojuelas esco- tadas. C . ohcordata, S\v. La legumbre linear ancha de 2'", C. an- (jUstisiUqua , Lam. 28. Hojas con mas de 5 pares de hojuelas, 29. — Hojas con 5-3- 2 pares de hojuelas oval-oblongas ó escotadas por el ápice y largas de 2-1'' estípulas cerdosas , corimbos axilares pedunculados, mas cortos que las hojas, de flores con sépalos largos de 2-3'" y pétalos de 5-6'" ; legumbre coriácea, linear, recta, lampiña, hinchada por las márjenes, mucronada, sub-sentada y larga de 3-5". C. emargi- nata, L. 29. Árbol de 30-50' de alto, de hojas con 6-5-4 pares de hojuelas oval-oblongas; redondeadas ó escotadas por el ápice, lampiñas, lar- gas de 2-1" ; corimbos pubescentitos dispuestos en panojas grandes, con brácteas persistentes y de flores con sépalos largos de 4-3'" y de pétalos de 8-6'" ; legumbre coriácea, pubescentita, linear, lije- ramente arqueada, por fin recta y pendiente, hinchada por las már- jenes, aguzada, cortamente estipitada y larga de 8-4". C. florida, V. C. gigantea, Bert. C. arbórea, Macf. — Árbol de 25 á 30' de al- tura, de hojas con 10-12 pares de hojuelas oblongo-lanceoladas, cortamente aguzadas, de cara inferior algo pelierizada, largas de 1" lt2á 2" 1|2; corimbos pubescentitos dispuestos en panojas grandes, oblongas y abiertas, con brácteas diminutas y deciduas; ovario lam- piño. C . spectabilis, De. C. trinitatis, Rchb. G. II. Cathartocapus. 1. Hojascon 10-20 pares de hojuelas, 2. — Hojas con 4-8 pares de hojuelas aovado-oblongas , obtusitas, rara- mente aguzadas, alampiñadas, largas de 4-5" y anchas de 2-2" 1{2; flores amarillas grandes, en racimos flojos, colgantes, con pedicelos largos sin bracteitas, cuyos sépalos son largos de 2-4"' y los pétalos de 8-12'" ; legumbre cilindrica, lisa, lampiña y larga de 1-2'. xirbol de 15 á 25' de altura, con las ramas estendidas y poco furnidas. C. fistiña; casia flstula, L.: C. T. V., 515. 2. Legumbre cilindrica, torulosa, lampiña, colgante; hojuelas in- equilaterales, oval-oblongas, obtusas, pubescentitas , marjinadas y largas de 2"; estípulas semi-asaetadas; racimos axilares mas cortos que las hojas, con pedicelos largos sostenidos por brácteas subula- das, flores con los sépalos largos de 3'" y los pétalos de 10'" y roji- zos. C. marginata, Eoxb. C. roxhurgii, De. C. javanica, Lin. — Legumbre comprimido-cilindrica, lampiña, transversalmente rugosa y larga de 3-1 1{2 y 4" rara vez; hojuelas oblongas, redondeadas por ambos estremos, de cara superior pubescentita, mientras la in- ferior pubescente es color de orin ; racimos axilares, colgantes, pu- bescentes y color de orin, cuyos pedicelos, sin brácteas, llevan flo- res de sépalos largos de 3'", pétalos de 4-6'" y anteras peludas. C. granáis, L. C. brasiliana, Lam. G. III. Moriega pterigorjjerma, Goertn : C. T. V., 51. G. IV. Mora excelsa, Benth. Sub-familia '¿. — MIMÓSE AS. —Plores casi regulares, dis- puestas en espigas con frecuencia amentiformes ó en capítulos ó ca DICOTILEDÓNEOS. CLASE LVI. — LEGUMINOSAS. 313 bezuelas orbiculares, mas rara vez en panojas ó en corimbos, de cáliz con 4-5 divisiones mas ó menos profundas, cuya prefloracion es con mayor frecuencia valvar, corola con otros tantos pétalos al- ternos con los segmentos del cáliz en cuya base se insertan ó en el receptáculo, libres y de prefloracion valvar, otras veces están solda- dos entre sí interiormente y forman así un tubo mas ó menos largo, y en este caso, no muy común, su vértice está imbricado en el capu- llo; estambres insertos junto con los pétalos, raras veces en igual número que ellos ó duplo . pero mas frecuentemente múltiple de él y hasta indefínidos, cuyos filamentos son libres ó reunidos entre sí en tubo; ovario único sentado ó estipitado, que se vuelve legumbre con dos ventallas ó lomentácea; semillas con el embrión recto, de- cotiledones grandes y carnudos por lo regular epígeos durante la germinación; matas, frútices, arbustos y árboles inermes ó aguíje- nosos y espinosos, con hojas mas ó menos descompuestas y hasta sub-descompuestas y pinadas. Tribu 1. Prefloracion del cáliz y de la corola siempre empizarrada. Parquieas. Pentachletra filamen- tosa, Benth. Tribu 2. AcAciEAS. Prefloracion del cáliz y de la corola siempre valvar. Gr. I. ExTADA, Ad. Hojascou 1-2 pares de pínulas, formadas de 2-5 pares de hojuelas oblongas ó eliptical-oblongas, de ordinario inequi- laterales, lampiñas ó alampiñadas interiormente, largas de 1-3"; racimos solitarios ó mellizos, largos de como 8", con muchas flores; legumbre sinuosa, larga de 2-8' y ancha de como 2 á 3". E . scan- dens, Benth. : C. T. V., 815. — Hojas con 4-6-2 pínulas formadas de 6-8 pares de hojuelas cada una, oblongas, redondeadas por el ápice, lampiñas ó pubescentitas inferiormente, largas como de 12, 14, 16"' y anchas de 6 á 8'"; racimos en panojas terminales, largos de 9 á \V\ abiertos y bien furnidos, cuyo eje grueso lleva muchos ejes secundarios saliendo mellizos, largos como de 4" y subulados, con muchas flores formando espiguitas amentiformes ; legumbre oblonga, entera, casi recta , larga de 6-12"' y ancha de 3" y hasta mas. E . folystachiay De: C. T. V., 798. G. II. Mimosa, L. 1. Estambres en número doble del de los péta- los, 5. — Estambres de ordinario cuatro, 2. 2. Plantas inermes enteramente, 3. — Plantas siempre mas ó me- nos aguijonosas, 4. 3. Planta herbácea, de 6 á 12", tendida en el suelo, cuyo tallo fili- forme y difuso echa raices por los nudos, inerme y alampiñado •, un solo par de pínulas, con 4á 5 pares de hojuelas oblongas, ob-aova- do-oblongas y largas de 2'" ; pedúnculos largos de 1-2'' y tanto como las hojas ; flores en cabezuela : legumbre sub-cuadrada, peluda y con una semilla. .1/. xha. L. 4. Mata fruticulosa, lampiña, cuyo tallo, alto de 1-2", tiene agui- jones corvos así como los raquises, largos de 2-3'' : un solo par de pínulas algo mas cortas que el raquis y con 3-4 pares de hojuelas inequilaterales, oblongas ó semi-elípticas, con una punta, marjina- das y ordinariamente de cara inferior con cerdas que se hallan tam- bién esparcidas por la márjen, largas de 8-12""; pedúnculos casi 314 DIVISIÓN SEGUPsDA. FANERÓGAMOS. tan larg"os como los capítulos florales j mucho mas cortos que los raquises ; valvas de la leg-umbre articuladas, lampiñas j con aguijo- nes en los bordes. M. casta, D. — Planta herbácea ó fruticulosa, peluda ó alampiñada, con aguijones infra-estipulares y esparcidos ; 1-2 pares de pínulas casi tan largas como el raquis, con 15-25 pares de hojuelas oblongo-lineares, con una punta, pestañosas, con cerdas aproximadas, alampiñadas y largas de 3-6'"; capitules florales ovoi- deos; legumbre oblongo-sinuosa, con 2-5 semillas, cuyas valvas ar- ticuladas son lampiñas y aguijonosas por los bordes, con aguijones tendidos. M. piidica, L. Variedad : 1 solo par de pínulas. M. uni- jiiga, Walp. AI. irritaMlis , Prl. 5. Legumbres con valvas articuladas, 6. — Legumbre con valvas continuas; frútice sarmentoso, cuyas ramas y peciolos están arma- dos de aguijones pequeños y corvos ; hojas con .3-5 pares de pínulas, con 3 pares de hojuelas muy inequilaterales, ob-aovadas y redondi- tas, anchas de 8-3'"; capítulos globosos, cuyos superiores están dis- puestos á manera de racimo; corola 3-flda: legumbre anchamente oblonga, entera, con 5-8 semillas, larga de 2-1'' sobre 8''' de ancho, lampiña, inerme, pero cuyos bordes tienen aguijones corvos. M. ce- r atonía, Benth. 6. Arbustillo cuyo tallo y peciolos, pelierizados y color de orin, están armados de aguijones subulados y fuertes ; hojas con 8-15 pa- res de pínulas, con 20-60 pares de hojuelas lineares oblicua- mente puntiagudas, dfir.eara superior lampiña, mientras la inferior es pubescentita y pestañosa, largas de 3-6'"; raquis pelierizado: es- típulas subuladas; capítulos florales globosos mas cortos que las ho- jas y cuyos superiores son racimosos ; cáliz con cerdas terminales; legumbre oblonga, con 8-10 semillas, larga de 3-2" sobre 5 de an- cho, cuyos artejos, transversalmente oblongos, están cubiertos por su superficie y bordes con cerdas largas, y amarillo teñido de color de orin. M. asperata, L. G. IL Leucena glauca, Benth., L. : C. T. V., 338. Gr. III. Acacia, W. — 1. Legumbre secabivalvar y por consiguiente dehiscente y comprimida, 2. — Legumbre siempre indehiscente, 6. 2. Raquises provistos de glándulas, 3, — Peciolos sin glándulas ; arbusto inerme, cuyas ramitas y peciolos son velludo-pubescentes ó alampiñados; hojas de 5-8 pares de pínulas, con 10-20-25 pares de hojuelas oblongas, obtusitas, pubescentitas ó alampiñadas inferior- mente, largas de 4'"; flores blancas con las anteras amarillas, en racimos ovoídeo-oblongos ó sub-globosos, cuyos pedicelos son mas largos que el cáliz: estambres indefinidos y muchísimos; legumbre corta-mente estipitada, oblonga, plano-comprimida, peluda, larga de 2" sobre 6'" de ancho, de valvas membranosas. Á. xillosa, W. A. lopliaiitoides, De. A. xalenzuela, Rich. Mimosa xillosa, Sw. 3. Estambres indefinidos y muchísimos sub-distintos, 4. — Es- tambres definidos 10-20 ; flores en capitules ; estípulas grandes y fo- liáceas; frútice abejucadito, sarmentoso, lampiño, armado de agui- jones corvos; ramitas tetrágonas que llevan hojas con 4-8 pares de pínulas distantes, formadas de 6-20 pares de hojuelas oblicuamente oblongas, mucronadas ú obtusas, largas de 3-4"'; estípulas renifor- DICOTILEDÓNEOS. CLASE LTI. — LEGUMINOSAS. 315 mes, deciduas j frecuentemente de V" de diámetro; raquis de ordi- nario con una glándula situada en la parte mediana del espacio que separa su base del par de pínulas mas inferior; capitules florales Mancos, arracimados y globosos; estambres 10 sub-distintos; le- gumbre llana, comprimida y lampiiia. A. tximarindifoUa, W. Mi- mosa tamarindi folia, L. 4. Flores en espigas, 5. — Flores en cabezuelas; bejuco leñoso muy alto, armado de pequeños aguijones ó á veces inerme, con las ramitas y peciolos pubescentitos ó alampiñados, cuyas hojas tienen de 6-12 pares de pínulas, con 15-20 pares de hojuelas oblongo- lineares, muy inequilaterales, semi-acorazonadas por la base, obtu- sitas, alampiñadas y largas de 4-3"'; glándula del raquis de ordina- rio diminuta; cabezuelas florales blancas, apanojadas ó en racimos axilares; legumbre estipitada, oblongo-linear, llano-comprimida, lampiña, larga de 4" y ancha de 10'", con el ginóforo largo de 4'", valvas membranosas. A. sarmentosa. Des. A. westiana, A. guado.- lupensis. A. itsioides, De. 5. Árbol inerme ó con aguijones infra-estipulares, cuyas ramitas y los raquises son blanquecino-pubescentes ; hojas de 10-30 pares de pínulas, con 30-50 pares de hojuelas lineares, obtusitas, pesta- ñosas, alampiñadas y largas de 2'"; glándula peciolar escutiforme y situada en la parte media del espacio que separa la base del raquis del par de pínulas mas inferior ; espigas amentiformes, elongadas, axilares y mas cortas que las hojas, con flores blancas; legumbre estipitada, anchamente linear, llano-comprimida, larga de S-G" y ancha de 6-8"', con el ginóforo largo de 4-6'"; valvas lijeramente reticuladas y venosas. A. catechií,, W. : C. T. Y., 113. — La acacia scleroxipla quizás no es sino una variedad de la catechu, de que di- fiere solamente por su legumbre sentada y la glándula peciolar si- tuada inmediatamente por debajo del par de pínulas mas inferior. A. scleroxyla, Tus. : C. T. V. 11.3. 6. O abriéndose muy tarde, llano-comprimida; estambres de or- dinario monadelfos; árboles inermes, 7. — Nunca dehiscente, liin- cliada, sul)-cilíndrica ó algo espesa y comprimida á la vez, llena de pulpa; estípulas de ordinario espinosas y axilares; vejetales no aguíjenosos; flores en cabezuelas, 8. 7. Ramitas pubescentes ó aveces alampiñadas, cuyas hojas están formadas de 7-12 pares de pínulas, con 20-40 pares de hojuelas obli- cuamente oblongas, con una nervadura juxta-marjinal, puntiagudas, pestañosas y largas de 3-4'" ; raquis con una glándula orbicular por encima de la base; cabezuelas florales globosas, arracimadas, blan- quecinas ; 10-15 estambres reunidos por la base y 4 veces mas largos que la corola pubescentita; legumbre recta, moniliforme y sinuosa, aguzada por ambos estremos, lampiña indehiscente, larga de 4" y ancha de 18'" en los trechos correspondiendo con las semillas; valvas membranosas y coherentes. A. jididrissin, W. A. t7Íchophylloides, Macf. A. anfjnstiioha, Bg. AlMzzia jnlibrissin, Boiv. — Ramitas alampiñadas, cuyas hojas se componen de 2-4 pares de pínulas, con 5-9 pares de hojuelas ob-aovado-oblongas, inequilaterales, redon- deadas por el ápice, largas de 1-2"; raquis con una glándula oval 316 DIVISIÓN SEGUNDA, FANEEÓGAMÜS. situada por encima de su base; flores pediceladas blancas, dispues- tas en espi guitas largas y de corola dos veces mas larga que el cáliz; estambres muchos reunidos por la base, largos, amarillos y verdus- cos por el ápice ; legumbre recta, oblougo-linear, puntiaguda por ambos estremos, sentada, llana é hinchada en las partes correspon- dientes con las semillas, lampiña, tarde dehiscente y larga de 6 12'^ sobre 1-2'' de ancho. A. Zeibeh.A.speciosa, W. A. propinqua, Rich. Allizzia LeliheTi, Benth. 8. Muchos estambres sub- distintos: estípulas espiniformes, 9. — Estambres monadelfos deñnidos; 1-2 espinas situadas por encima de las estípulas membranosas ú obsoletas, 11. 9. Pedúnculos sin bracteitas en su parte media; legumbre no mo- niliforme, 10. — Pedúnculos con brácteas en su parte media; le- gumbre moniliforme, sinuosa, estipitada, comprimida, ligeramente corva, tomentosa ó. alampiñada, larga de 4-6" y ancha de 8'", con el ginófloro de 6-8'". Árbol de ramitas y raquises tomentoso-pubes- centes ó alampiñados, cu3^as hojas tienen de 4-1 y aveces 9 pares de pínulas, con 10-20 pares de hojuelas oblongo-lineares, obtusas, 1 l{2-2" largas ; raquis ordinariamente glandulífero; flores en cabe- zuelas globosas. A. arábica, W.: C. T. V., 673. 10. Estipitada arqueada, tomentosa, con las valvas convexas y larga de 2 li2-2" sobre, 6-8'" de ancho; arbusto ó árbol bajito, cuyas ramitas y raquises son tomentoso-pubescentes; hojas compuestas de 2-6 y á veces 8 pares de pínulas, con 10-20 pares de hojuelas dimi- nutas, oblongo-lineares, obtusas, alampiñadas, largas de 2" ; raquis con una glándula oblonga, deprimida, situada por encima de la base, y de ordinario otra entre el último par de pínulas ; espinas estipu- lares fuertes, blanquecinas y largas de 6'" ; cabezuelas florales ama- rillas, solitarias y globosas. ^1. tortuosa, W. Mimosa tortuosa, L. M. salÍ7tarícm,Y. : C. T. Y., 114-611. Legumbre cortamente estipi- tada, corva ó rectita, lampiña, estriada, oblongo-linear y por fin cilindrica, larga de 2-1" li2, ancha de 4-6'", con el ginóforo de 1-2'" ; arbusto ó árbol bajito bastante frondoso, con las ramitas y los raquises alampiñados; hojas formadas de 4-8 y á veces 2 pares de pínulas, con 10-20 pares de hojuelas diminutas, oblongo-lineares, obtusas, largas de 6 á 8'"; raquis con una glándula escutifor- me situada por encima de la base, y de ordinario con otra entre el último par de pínulas; espinas estipulares cerdosas; cabezuelas flo- rales amarillentas, muy fragantes, globosas y fasciculadas. A. far- nesiana, W., etc. : C. T.V., 116-672. G. IV. Calliandra, Benth. — 1. Flores siempre en numero determinado ; 2. — Estambres 20 ó muchos mas; flores sésiles, de cáliz membranoso no estriado, y de corola 5-fida, cortamente reunida por la base; arbusto de unos 10' de altura, inerme, cuyas ramitas y raquises son pubescentes ó alampiñados; hojas con 4-6 y á veces 2-8 pares de pínulas de 12-25 y hasta 40 pares de ho- juelas oblongo-lineares, obtusitas, alampiñadas 3^ largas de 4-5'"; flo- res blancas en cabezuelas fasciculadas, con 20-25 estambres también blancos ; legumbre rectita, linear, aguzada por la base, larga de 3" DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVI. — LEGUMINOSAS. 31'7 y ancha de 3'", con las valvas papiráceas. C. portoriceusis, Beíith. Mimosa portoricensis, M. caracasana, Jacq. Acacia 2)ortoricensis, W. A. ungíílata, Desv. A. vespertina, Macf. A. litúoralis, Rich. 2. Flores mas ó menos sentadas; legumbre sin pulpa, 3. — Flores pediceladas: legumbre llena de pulpa; cáliz tomentoso no estriado; corola 5-dentada; estambres reunidos en tubo incluso; árbol muy alto, muy corpulento y muy frondoso, inerme, con ramitas atercio- pelado-pubescentes que llevan hojas con 4 ó á veces 6 pares de pí- nulas de 1, 2, 1 pares de hojuelas oblicuamente ob-aovadas ú ob- aovado-oblongas, obtusas, lampiñas y lustrosas por la cara superior, mientras la inferior es pubescente, largas de 3-8'"; raquis con glán- dulas por la base y entre las pínulas; grupos florales con los pedún- culos largos de 5-2" y los pedicelos de 2-1'"; cáliz tomentoso sub- ventrudo, escediendo un poco la parte media de la corola tomentosa amarillenta, y larga de 6'"; estambres 20 de color carmesí-, corta- mente reunidos, y largos como de 2"; legumbre rectita ó á veces corva, linear, subsesil, larga de 8-4" y ancha de 8-5'", con las val- vas coriáceas y lampiñas, y las márjenes un poco espesas y pubes- centes, sinuosas. C.samoM, Gr. C. tíibidosa, BenÜi. Mimosa saman. Jacq. Liga saman, AY. Pithecolohiiím saman., Benth. 3. Flores de ordinario sentadas ; cáliz estriado; corola 5 dentada: estambres reunidos en tubo delgado, 4. — Flores siempre sésiles en cabezuelas florales, fasciculadas y laterales; corola estriada 5-den- tada; estambres reunidos en tubo delgado eserto; legumbre llano- comprimida, abriéndose tarde y no con elasticidad ; árbol de unos 25' de altura, inerme y lampiño, de hojas con 1 par de pínulas for- madas de 2 1[2-1 1|2 pares de hojuelas distantes, elípticas, con una punta, oblicuas por la base aguda, largas de 5-2", y cuyas inferio- res son alternas ó solitarias; una glándula orbicular, á veces apenas notable, está situada entre el último par; cabezuelas florales color carmesí ó de rosa, sentadas ó cortamente pediceladas saliendo de las ramitas del año anterior, con corola tubulosa, larga de 4'", y mucho mas larga que el cáliz diminuto; estambres largos de como 1" y reunidos por su parte media; legumbre lijeramente corva, li- near-oblonga, redondeada por la base, ondeada por la márjen, algo espesita, larga de 5-4" y ancha de 10-8'", con valvas coriáceas y lampiñas. C. latifolia, Gi\ Mimosa latifolia, L. Jnga latifoUa, W. Pitliecolohium latifolium, Benth. 4. Estambres de 20 á 40, 5. — Estambres de 10 á 20, 7. 5. De 20 á40, 6. — Siempre 20, de tubo delgado encerrado en la corola; arbusto inerme, con las ramitas y raquises lanudos, hojas formadas de 4-3 pares de pínulas, con 20 á 40 pares de hojuelas pe- queñas, falciforme-lineares, aguzadas con una punta obtusa, largas de 2-1'" Ifi, tiesas, pestañosas y alampiñadas; estípulas persisten tes, oblongo-lanceoladas, estriadas; cabezuelas florales globosas, sub-sentadas, axilares ó en espigas interrumpidas, de corola peli- erizada, larga de 3'" y dos veces mas que el cáliz alampiñado y 2-3 veces mas corta que los estambres purpurinos y reunidos por el 1{3. C. cmcgerii, Gr. 6. Arbusto inerme, lampiño y alto de 15-20'; hojas con 3-2 pares 318 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEROaAMOS. de pínulas de 18-8 pares de hojuelas oblongo-trapeziformes, anclia- mente truncas por la base, y oblicuas por el vértice, largas de 5-6'" j anchas de 2-3'"; cabezuelas corimbosas, con flores sentadas, de corola 3--5-fida y larga de 3'"; legumbre corva, lanceolado-linear, comprimida, lampiña, larga de 2-2'' il2 y ancha por el vértice de 3", mientras la base va aguzándose en ginóforo largo de 6'". C. coonosa, Benth. Mimosa comosa, Sw. J7iga comosa,-^ . Fithecolobium como- sum, Benth. 7. Estambres 10-15, cuyo tubo está encerrado en la corola; ho- juelas pequeñas, con estípulas espinosas ó con una espina por su base, 8. — Estambres 10-20, cuyo tubo delgado está eserto; hojue- las anchas; arbusto inerme, alampiñado, con hojas de 1 par de pí- nulas, con 3-7 pares de hojuelas eliptical-oblongas ú ob-aovadas, obtusitas, largas de 4-8'" y hasta 12"; flores sésiles en las cabezue- las pedunculadas, de corola larga de 3'" y á veces mas que el cáliz; estambres 10, largos de 12"', purpurinos y de tubo cortamente eser- to; legumbre lijeramente corva, anchamente linear, largamente aguzada por la base, lampiña y larga de 3" sobre 4-5'" de a.ncho. C. purpurea, Benth. Mimosa purpurea, L. Jnga imriyurea, ^\' . 8. Arbusto tortuoso, cuyas ramitas pubescentes ó alampiñadas están armadas de espinas infra-estipulares y llevan hojas de 1 solo par de pínulas, con *7-4 pares de hojuelas oblongas, obtusas, lampi- ñas, sub-pestañosas,. y largas de 3-2"'; estípulas lanceoladas, estria- das y largas de 2"'; flores sentadas en cabezuelas pedunculadas, de corola larga de 2'" y tres veces mas que el cáliz; estambres purpu- rinos, largos de 8-12'"; legumbre rectita, linear, aguzad'a por la base,, velludo-pubescente, larga de 2" 1x2 sobre 3'" de ancho, con ventallas coriáceas. C . hcematomma, Benth. G. y.PiTHEcOLOBiuM, Mart. — 1. Legumbre en figura de caracol, con las ventallas frecuentemente al fin torcidas, de semillas semi- cubiertas por un arilo carnoso; raquis con glándulas entre las pínu- las, 2. — Legumbre torcida en espiral, con semillas sin arilo; ra- quisescon glándulas entre las pínulas; árbol grande con ramitas y raquises pubescentes y color de orin ; hojas con 4-8 pares de pínu- las de 3-12 pares de hojuelas romboideas, lampiñas o alampiñadas inferiormente, largas de 6-10'" j anchas de 3-5'" ; flores subsesiles en cabezuelas largamente pedunculadas ó en espigas cortas; legum- bre llano-comprimida, oblongo-linear, alampiñada, roja y ancha de 3'", y dando 3-5 vueltas contiguas. P. micradenium, Benth. 2. Arbusto de 10 á 15' de altura, armado de estípulas espinosas diminutas ó á veces inerme y lampiño: hojas uni-yugas, con un par de hojuelas oblicuamente ob-aovadas ú oblongas, obtusas y largas de 2-1"; flores verdoso-amarillentas, sentadas en cabezuelas pedun- culadas y arracimadas, de ordinario pubescentes; legumbre plano- comprimida, anchamente linear, lampiña y dando poco mas de una vuelta, roja y ancha de 4-5'". P. unguis cati, Benth. Mimosa mi- guis cati, etc.: C. T. Y., 118.. G. VI. Jnga, \Y. Mart. — 1. Legumbre comprimida, 2. — Legum- bre cuadrangular y con 4-costillas ó 4-angulosa, á veces sub-ci- líndrica, 5. DICOTILEDÓNEOS.— CLASE LYI. — LEGUMINOSAS. 319 2. Flores en espigas, 3. — Flores en umbelas ; arbusto lampiño de hojas con 1-4 pares de hojuelas elípticas ó aovado-lanceoladas, de repente aguzadas, lustrosas, largas de 3-1""; raquis desnudo, con una glándula pequeña y cilindrica ; umbelas cortamente peduncu- ladas, con pedicelos tan largos como las flores, lampiñas, de cáliz diminuto j con el tubo estaminal largamente eserto : legumbre lam- piña, oblonga, llano-comprimida, larga de 4", ancha de 1" y con las márjenes lijeramente espesas. /. heteropliylla, W. J. prostrata, Steud . 3. Flores en espigas alargadas ó en racimos espiciformes, 4. — Flores siempre en' espigas compactas y aovadas; árbol de ramitas espesas y pubescentitas, de color de orin; hojas con 2 pares de ho- juelas elípticas, puntiagudas, frecuentemente lustrosas y por fin alampiñadas, con pelo esparcido, largas de 6-3", cuyas inferiores son mas pequeñas, todas con las venas primarias como 12-yugadas, y proeminentitas inferiormente ; raquis^ alado, con glándulas gran- des y escudadas; flores sentadas en espigas cortas, ao vado-oblongas, largas de 5-6'" con brácteas lineares y deciduas, de corola pinchu- da, amarilla, larga de 6"' y dos Teces mas que el cáliz estriado y encerrando el tubo estaminal; legumbre llano-comprimida, alampi- ñada y con las márjenes proeminentes. /. setífera, De. ./. versicolor, Spruce. /. nítida, W. 4. Árbol grande, lampiño,, de hojas con 2-1 pares de hojuelas elípticas ó eliptical-oblongas, con una punta obtusita, lustrosas, largas de 4-3" y anchas de 1 l\2á 2" , cuyas inferiores son menores; raquis desnudo, con glándulas diminutas escudadas; flores estendi- das en racimos especiformes largos de 2-3", de pedicelos muy cor- tos y mas que el cáliz, de corola blanca lampiña, infundibuliforme, largado 3'" y 4 veces mas que el cáliz, iguales al tubo estaminal; legumbre lampiña, oblonga, llano-comprimida, un poco hinchada en la parte correspondiente con las semillas, larga de 3-2" y hasta 5" sobre 10-12"' de ancho. /. laMríiiea, W., etc. : C. T. V., 119. 5. Árbol grande cuyas ramitas ásperas, pubescentes ó alampiña- das llevan hojas de 4-5 pares de hojuelas eliptico-lanceoladas, cor- tamente aguzadas, largas de 4-2'', con los peciolos pubescentes y color de orin ; raquis alado y con glándulas escudadas; flores en es- pigas cortas, paucífloras, sésiles ó las inferiores cortamente pedicela- das, cuyos pedicelos son mucho mas cortos que el cáliz tomentoso y no estriado, largo de 4-6'", de corola blanca, larga de 6-8'", cerdoso- lanuda y conteniendo el tubo estaminal; legumbre tomentosa, sub- falciforme, larga de 6" y ancha 6-12'". /. vera, W. : C. T. Y., 521. — Árbol grande cuyas ramitas ásperas, pubescentes ó alampiñadas llevan hojas con 4-3 pares de hojuelas elípticas ó elíptico-ianceola- das, puntiagudas y largas de 4-2" sobre 2-1" 1|2 de ancho; raquis alado y con glándulas escudadas; flores en racimos cortos y pauciflo- ros, cuyos pedúnculos, tomentosos 3^ color de orin, llevan pedicelos tan largos como el cáliz tomentoso, campanudo y no estriado, que lo es de 2-3'", y sin embargo dos veces mas corto que la corola cerdoso-lanuda, conteniendo el tubo estaminal, y" larga de 5-6'"; legumbre tomentosa falciforme y larga de 4-6". ./. ingoides, W. 320 DIVISIÓN SEaX'NDA. FANERÓGAMOS. G. VI. Enterolobiüm cíjclocarpum, Gr. Mimosa cyclocarim, Jacq. Iiiqa cyclocaiya, AY. PithecoloMmn cyclooarpiim, Benth. G. VIL VivTiÁ.Y)¥.^iA ])eregrina, Benth. Mimosa jñj^tadenia, L. G. VIII. Adenanthera ¡^avonina, L. G. IX. Prosopis jíilijlora , De. P. chdcis, Var. P. domingensis, Benth. Mimosa jiiliflora, Sw. AlgaroUa julijiora, As. Gr. GLASÉ LVII. — ROSÍNEAS. Familia l'il. — CRISOBALANEAS. — Arbustos ó árboles de hojas alternas, simples, enteras, coriáceas, acomi^ñadas de estípu- las; flores de cimas y racimos mas ó menos apanojados, de cáliz abollado por la base, 5-fido, raras veces 4-fido ó dentado, de pre- floracion imbricada; corola con 5 pétalos, pero que suelen faltar algunas veces; muchos estambres perijinos, frecuentemente mas desarrollados de un lado que del otro; ovario único, libre, unilocu- lar, con dos huevecillos colaterales, basilares y anátropos, estilo su- prabasilar y lateral; fruto drupáceo, cuya semilla única tiene su te- gumento membranoso. Chkysobalanus, L. — Drupa oval de color variado; arbusto muy ramoso, de 6-12' de alto, y que á veces se vuelve arbolito de unos 20', con hojas ovales ú óvalo-redondeaditas, redondeadas ú obtusitas por el ápice, largas de 3", 2""', 1(6 2 li2, 2 sobre 3, 2 li2, 2'' de ancho, muy cortamente pecioladas ; cimas axilares, pubescen- tes, mas cortas que las hojas, con ñores blancas, de estambres vellu- dos; drupa carnosita, oval, tan pronto blanca como amarillenta y morada, del tamaño de una ciruela, con estrias obtusas, costilludas. C. icaco, L.: C. T. V., 108. — Drupa ob-óval,_ larga de 8'", pun- tiaguda por la base, mas pequeña que la del icaco, de pericarpio delgado, con las estrias menos obtusas ; arbusto de 6' de alto, ramo- sísimo, con hojas ob-aovadas ú ob-aovado-redondeaditas, puntia- gudas ú obtusitas por la base, largas de 5 1|2, 6" 1x4 sobre 2 li2, 3, 3 1\2 de ancho ; cimas axilares pubescentes y mas cortas que las hojas; estambres velludos: C. ])eUoca7'pus, Mey. C. icaco. De. Va- riedad B. Familia 132. — ROSACFAS. ~ Plantas herbáceas anuales ó vivaces, matas frútices, arbustos, arbolitos y árboles grandes, con hojas sencillas, enteras, festoneadas, dentadas, mas ó menos loba- das, algunas veces compuestas, dijitadas ó pinadas, siempre alter- nas, cuyo peciolo mas ó menos largo está acompañado por dos estí- pulas de forma y tamaño variados, persistentes, ya sueltas, ya soldadas con su parte inferior; flores de ordinario hermafroditas y algunas veces polígamas, de inflorescencia tan pronto solitaria y en grupos axilares mas ó menos furnidos, como racimosa, espigada y apanojada terminal ; se componen de un cáliz monosépalo con 5 di- visiones mas ó menos profundas, iguales ó desiguales, todas confor- mes ó algunas diferentes de las demás, alguna vez que otra acom- pañado por la bUse de un calículo ó involucro soldado con él ó suelto. con tantos lóbulos como él: de una corola con 4-5 pétalos rosáceos DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVII. — ROSÍNEAS. 321 insertos en la garganta del cáliz, con cuyos segmentos alternan: suele faltar algunas veces; estambres muchos insertos, junto con los pétalos, pero un poco mas por abajo, perijínicos; pistilo único j simple ó compuesto y formado por la reunión de muchos carpelos agrupados sobre una especie de receptáculo mas ó menos pronun- ciado y de varias formas; á veces está formado de muchos carpelos libres esteriormente y distintos, colocados en el cáliz tubuloso; otras veces están soldados por su parte interna, mientras que por la es- terna están pegados con el cáliz; algunas veces están reunidos sobre un receptáculo y forman capitules ; en fin, el ovario es único, mas ó menos globoso, libre ó soldado con el cáliz: tales ovarios son siem- pre uniloculares, con 1-2 ó muchos óvulos, suturales y anátropos, y de su ápice sale un estilo simple mas ó menos largo, algunas veces lateral, con estigma sencillo. El fruto es también muy variado, y consiste ya en una drupa mas ó menos gruesa y carnuda, ya en una melonida ó en un nuculanio; otras veces es uno ó algunos aquenios agrupados sobre un receptáculo carnudo ó seco; algunas veces pro- longado el ápice ; otras veces son cajitas; algunas veces son bayas ó drupas pequeñas soldadas entre sí y formadas por el cáliz que se ha vuelto carnudo ; semillas de embrión homótropo y sin endospermo. Grupo 1". — Pomáceas. — Cáliz monosépalo tubuloso, de limbo 5-partido con prefloracion imbricada ; corola con 5 pétalos que faltan rarísima vez; estambres libres; ovario adherente ó in- fero, cuyo vértice lleva 2-5 estilos distintos ó soldados entre sí hacia la base, terminado cada uno por un estigma simple, con 2-5 celdas conteniendo dos óvulos colaterales y ascendentes ; fruto carnudo , grueso , coronado por el limbo calizinal persistente , con 2-5 celdas cartilajinosas ó reemplazadas por otros tantos huese- citos; es pues una melonida ó un nuculanio de semillas con tegu- mento coriáceo ó cartilajinoso. Malusvulgaris, L. Sidonia vulgai'is. En Caracas esos árboles frutales se cultivan y dan frutos re- gulares, pero no tan buenos ni tan sabrosos como en Europa. Grupo 2. Roseas. Cáliz cuyo tubo ventricoso está contraído ha- cia el vértice y semi-adherente, de limljo partido en 5 lacinias, de las cuales algunas están siempre pinatifidas; corola de 5 pétalos; muchísimos estambres ; carpelos huesosos numerosos é insertos ha- cia el fondo del cáliz; con un estilo lateral muy largo y conteniendo un solo huevecillo colgado ; estilos y estigmas algunas veces solda- dos entre sí en haces y saliendo mas ó menos por fuera del tubo del cáliz, que se vuelve carnudo y simula así el fruto. Rosa Imñ gata, Mich., y muchas otras especies ó variedades que se cultivan para el adorno de los patios, y se aclimatan con bastante facilidad. Grupo 3. Driádeas. Cáliz con 5 divisiones, rarísimas veces con 4 ó menor número, de prefloracion de ordinario valvar, cuya base está frecuentemente acompañada esteriormente de un calículo ; co- rola con igual número de pétalos que suelen faltar alguna que otra vez ; estambres indefinidos ó en número fijo y definido ; frecuente- mente muchos carpelos, algunas veces reducidos á un corto número, llevados por un receptáculo central mas ó menos desarrollado y saliente, libres; estilo terminal ó lateral conteniendo 1-2 óvulos, TOMO II . Jl 322 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. erguidos ó suspendidos; plantas herbáceas, matas, frútices y ar- bustos. Tribu 1. Dalibárdeas. Cáliz sin calicillo alguno, estambres in- definidos ; muchos carpelos cu3'o estilo es terminal y que se vuelven otras tantas drupitas; embrión de radícula superior: frútices sar- mentosos j de ordinario aguijonosos. RuBUS, 1. Aguijones fuertes y corvos, 2. — Aguijones muy del- gados, rectos y subulados, frútice no sarmentoso, alto de 4-5', no muy ramoso; frutos blancos ó rojos bastante desarrollados y muy sabrosos. M. idceus, L. 2. Hojas de 3-5 hojuelas eliptical-oblongas, puntiagudas, pubes- centes superiormente y peludo-tomentosas inferiormente, desigual- mente aserradas, con las venas primarias aproximadas, peciolo largo, aguijonoso inferiormente así como la costilla; racimos com- puestos, velludos, pétalos ob-ao vados tan largos como los segmen- tos del cáliz ; fruto ovoídeo-redondeadito, largo de 4'", de color purpurino, dos veces tan largos como el cáliz estrechado, drupitas numerosas, deciduas. B. j amaicen sis, Sw. R.ferrugineus, Wich. — Alampiñado y de hojas con 3 hojuelas elípticas, puntiaguditas, lam- piñas y concoloras, desiguales y profundamente aserradas, con las venas primarias aproximadas, largamente pecioladas, cara inferior de la costilla aguijonosa ; pedicelos largos, fasciculados y formando racimos compuestos, cáliz pubescente apretado, mitad de lo largo del fruto aovado, redondo, largo de 3'" sobre 2" li2 de ancho, prieto purpurino. R. alinmis, Macf. Tribu 2. Fragarieas. — Cáliz siempre con un calículo, y de pre- fioracion valvar; estambres muchos é indefinidos; muchísimos aquenios diminutos de estilo lateral, situados sobre un receptáculo carnudo; embrión de radícula superior. Fragaria xesca, L. Grupo 4. Amigdáleas. Cáliz 5-fido, de prefloracion imbricada ; corola de 5 pétalos; muchísimos estambres ; ovario único libre, con un solo estilo enteramente ó casi terminal, unilocular y conteniendo dos óvulos colaterales y suspendidos ; drupa mas ó menos carnuda, con un hueso duro conteniendo la semilla de tegumento membrano- so ; arbustos ó árboles mas ó menos grandes. Prunus, L. 1. Dos manchas glandulosas situadas por la base ó un pocp apartadas de ella y de la cara inferior de las hojas, 2. — Hojas sin ninguna mancha glandulosa por su cara inferior; árbol bajito, con hojas elípticas ó eliptical-oblongas, redondeadas por la base y con una punta obtusa por el vértice, lustrosas superiormente, largas de 3 l[2"-2 lf2 sobre 2"-r' de ancho; flores en racimos axi- lares; estambres 10-20; drupa globosa de 4'" de diámetro, sub-mu- cronada V de color purpurino. P. splimr ocarina, Sw., etc.: C. T. V., 612.^ 2. Situadas por la base ; árbol alto de hojas oblongas ó aovado- oblongas, redondeadas por la base y obtusitas por el ápice, largas de 6-4" sobre 2 li2-2" de ancho ; racimos laterales pubescentitos ó alampiñados; estambres muchos ó 20; drupa ovoidea, lijeramente mucronada, purpurina, larga de 10"' y ancha de 6'". R, occidentalis, Sw. — Un poco apartada de la base; árbol de mediana altura, con DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LYíII. — MIRTOÍDEAS. 323 hojas elípticas ó elíptico -oblongas mucronaditas, agudas por la base, lustrosas, largas de 4-3" y anchas de 2-1" li2, con las glán- dulas distantes de 1'" l\2 de la base y cerca de la márjen ; racimos axilares ; estambres 20 ; drupa globosa, trunca por el ápice, casi ne- gra V ancha de 6'". P. pleur adema, Gr. C.T. V., 612. Familia Ul. — IIOMALIEAS \x HOMALIACEAS. — Kv- bustos ó árboles con hojas simples, enteras, coriáceas, pecioladas, alternas, con estípulas caducas acompañando á la inserción del üe- ciolo ; ñores hermafroditas en espigas, racimos ó panojas y com- puestas de un cáliz monosépalo, cuyo tubo corto y cónico á la vez se termina en un limbo con 10-30 segmentos, de los cuales son mayo- res y valvares los esteriores, mientras que los interiores son peta- loídeos y tienen papel de corola que suele faltar, por la cara inte- rior y hacia la base de ellos hay algunos apéndices glandulosos y sentados; estambres en número muy variado, ya igual al de los ló- bulos esteriores del cáliz y opuestos á ellos, ya muchísimos y reuni- dos en hacecillos ó poliadelfos ; ovario de ordinario semi-ínfero, unilocular, polispermo, cuyos muchos óvulos están asidos de 3 ó de 5 trofo>permos parietales, con igual número de estilos saliendo de su vértice, cada uno con su correspondiente estigma sencillo. Fruto á veces seco y capsular, otras veces carnoso, con semillas cuyo em- brión está alojado en un endospermo carnoso. Hoonalium racemo- sum, Jacq.: C. T. Y. 795. CLASE LVIII.— MIRTOÍDEAS. Familia 133. — MIRTFAS ó MIRTÁCEAS. — Arbustos, arbolitos y árboles grandes y corpulentos, de hojas simples, coriá- ceas, lustrosas, cortamente pecioladas , persistentes, con muchas glándulas transparentes y aromáticas, opuestas, ordinariamente sin estípulas, enteras, con nervaduras marjinales ó justamarjinales y arqueadas; flores de ordinario blancas siempre hermafroditas, ora en grupos axilares ora en racimos ó en cimas terminales, compues- tas de un cáliz monosépalo adherente, de limbo con 4-5-6 segmentos mas ó menos delgados y profundos; de una corola con tantos péta- los cuantas divisiones calizinales hay, con las cuales alternan y pe- gados en la parte superior ó garganta del cáliz ; son muchísimos los estambres, libres ó algunas veces reunidos por medio de los fila- mentos diversamente soldados entre sí é insertos junto con los péta- los, pero un poco mas abajo de ellos, de anteras terminales y muy pequeñas. Pi&tilo formado de un ovario único é infero, rarísimas veces semi-ínfero, con 2-6 celdas conteniendo muchos óvulos, y de cuyo vértice sale un estilo simple terminado por un estigma entero ó lobulado. El fruto ya es seco, ya carnudo y tan pronto una baya como una drupa ; semillas sin endospermo, de embrión cuyos cotile- dones no están nunca retorcidos mutuamente uno al rededor del otro á manera de corneta, ni enroscados tampoco. 324 DIVISIÓN SEGUNDA. FANEEÓGAMOS. Análisis dicotómica de Icis tribus. 1. Estambres libres, 2. — Estambres soldados entre sí, 3. 2. Flores de cáliz con 4-5 lóbulos, corola con 4-5 pétalos, muchos estambres distintos, ovario con dos ó algunas celdillas monospermas por causa de aborto; hojas opuestas, con glándulas transparentes j aromáticas. T. I. Eumirteas. A. — Flores algunas raras veces sub- dioicas, compuestas de un cáliz 4-5-lobo ó 4-5-dentado, corola con otros tantos pétalos : estambres en número definido, 8-10 distintos, con anteras corvas abriéndose por la base á favor de grietas cortas ó de poros; fruto carnudo abajado ; embrión de cotiledones torcidos, hojas opuestas bien enteras y sin estípulas. T. II. — Memecileas. MouRiRiA my7'tiUoides, Poir. Petaloma myrtilloides, Sw. 3. Cáliz con 4-5 lóbulos, otros tantos pétalos forman la corola; muchísimos estambres dispuestos en algunas series, cuyos filamen- tos soldados entre sí forman un tubo corto j recto ; ovario con 2 ó algunas celdas, conteniendo 2 ó algunos huevecillos , fruto abayado ó seco sin ventallas, con 2 ó algunas celdas conteniendo pocas semi- llas, cuyo embrión tiene los cotiledones carnudos. Hojas alternas, raras veces opuestas ó verticiladas no aromáticas y sin puntos transparentes. T. II. Barringtonieas. — Barringtonia. Gustavia augusta, — Flores cuyo cáliz monosépalo tiene el limbo 6-partido y tantos pétalos en la corola ; muchísimos estambres en algunas series dispuestos y monadelfos, cuyo tubo tiene la forma de cartucho y cuyo andróforo natural está como abovedado : fruto carnudo inte- riormente y de casco leñoso y durísimo, abriéndose por un opérculo superior; hojas no aromáticas y por consiguiente desprovistas de puntos transparentes , alternas, enteras y con estípulas caducas cuando tiernas ; árboles grandes. T. lY. Lecytideas. Bertholettia excelsa. — Couroupita guiarte usis, Aubl. Estas tres últimas tribus son tenidas ya por familias distintas de la de las Mirtáceas, pero en la misma clase. A. G. I. Calyptranthes, Sw. 1. Ramitas cilindricas, 2. — Rami- tas comprimidas y como de 2 filos, con puntitos interpeciolares, 3. 2. Arbusto de ramitas lampiñas , de hojas elípticas, obtusitas, lampiñas, con puntitos transparentes diminutos, y por fin opacas, con venas delgaditas formando arcos, largas de 2 I [2-2". Cimas lampiñas, de pedúnculos 1-3 veces 3-fidos, de ordinario mas cor- tos que las hojas, de flores cuyos pedicelos simples son largos de 2-3'", de cáliz ovoídeo-mucronado y lampiño, corola ningu- na, baya sub-globosa. C. syzygium, Sw. C . rigida, Macf. Mirtus syzygium, L. — Árbol bastante grande cuyas ramitas pubescentes llevan hojas oblongo-lanceoladas, aguzadas y terminadas por una punta estrecha y obtusita, de cara superior lustrosa y lampiña, mientras la inferior es sedosa, con puntitos transparentes muy poco visibles, y por fin opacas, venas aproximadas, delicadas y reunién- dose hacia la márjen, largas de 6-3" sobre I|2-r' de ancho; cimas sedosas color de orin, fasciculadas, subsesiles ó cortamente pedun- culadas, simples, reducidas ó grupos bracteolados igualando los pe- DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LVIII. — MIRTOÍDEAS. 325 ciólos largos de 3'", algo mas largos que ellas; cáliz ovoídeo-sub- gioboso , apenas mucronadito , pubescente, color de orín; corola nula, bava globosa, cuyo diámetro es de 3'", con 1 sola semilla. C. sericea/Cjv. C. T. V., 281. 3. Arbusto de ramitas lampiñas con hojas elípticas ó elíptico-lan- ceoladas, puntiagudas y obtusitas por el ápice, de cara inferior se- dosa ó por fin alampiñada, largas de 2" 1|2-1 \\^, casi sin puntitos transparentes, cuyas venas delgaditas se juntan hacia la márjen ; cimas cerdosas color de orin, compuestas, abiertas, tricótomas, casi tan largas como anchas, pedunculadas, de flores sésiles temadas, con cáliz ob-ovoídeo-globoso, redondeado por el vértice obtuso, se- doso y largo de V" ; corola nula, baya globosa. C . pallens, Gr. G. II. Myrcia, De. 1. Tubo calizinal, prolongándose mas allá que el ovario, baya cóncava por el ápice marjinado, 2. — Tubo calizinal casi tan largo como el ovario : baya de ápice plano por dentro de la márjen ó corona persistente, 3. 2. Arbusto de ramitas pubescentes color de orin ó alampiñadas, con hojas coriáceas, ob-aovadas ú oval-obtusas, ó escotadas, lam- piñas, cortamente pecioladas, de ordinario opacas, con puntos im- presos y lustrosas superiormente, cuyas venas se juntan hacia la márjen arrollada ó inconspícuas, largas de 1" l¡2-2 1(2, las supe- riores son menores con el peciolo de l'"-2'"; pedúnculos simples sa- liendo de las axilas de las hojas con 9-3 ó á veces 1 ñores de 4-5'" de diámetro; pedicelos abiertos cuya flor central es pedicelada ó sub-sesil, con cáliz de 5 segmentos redondeados, interiormente se- dosos; ovario 3-locular; baj^a globosa de 6'" de diámetro, con 3-6 semillas, cuyos cotiledones son espesitos y muy torcidos. M. coriá- cea, De. De este vejetal hay tres variedades : 1*. Ramitas y pedún- culos densamente pubescentes, hojas opacas; pedúnculos sub-solita- rios con 1-3 flores mas cortos que las hojas. M. swartziaua, Gr. Myrtícs coriácea, Sw. M. cotinifolia, Poir.; 2^. De ramitas alampi- ñadas, hojas opacas con peciolo largo de 1'" ; pedúnculos lampiños, aproximados 3-7-floros, mas largos que las hojas. M. Jaccpiiniana, Erb. Eugenia panicidata , Jacq. Aulomyrcia Jacquiniana, Berg. — 3"^. Con ramitas densamente pubescentitas; hojas por fin provistas de puntos transparentes esparcidos; pedúnculos lampiños esparcidos 5- 9-floros, casi tan largos como las hojas, formando cimas corimbifor- mes esertas. M. imrayana, Grb. C. T. Y., 105, 3. Hojas reticulado-venosas , 4. — Venas principales pareciendo costillas, cuya impresión es visible por la cara superior, mientras son preeminentes por la inferior, que es diminutamente areolada ; árbol grande de ramitas tomentosas color de orin, llevando hojas tiesas, coriáceas, elípticas, elíptico-lanceoladas ó eliptical-oblongas, puntiaguditas con una puntita muy estrecha, lampiñas y lustrosas superiormente, alampiñadas y tomentosas color de orin inferior- mente sobre la costilla y las nervaduras acostilladas reunidas en arcos justa-marjinales, mientras las venas inmersas forman una redecilla muy fina, con puntos transparentes ó por fin casi opacos, ordinariam.ente largas de 3 l{2-2", á veces solamente de 10-12'" ; panojas tomentosas color de orin, tricótomas, saliendo de las axilas 326 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. mas Superiores, con flores cié 4''' de diámetro, en grupos, subsesiles, de cáliz tomentoso color de orin, con 5 lóbulos orbiculares; ovario bilocular, baja globosa. M. ferruginea. M. deflexa. M. Humhold- tiana, De. Eugenia deflexa, JE. ferruginea, Poir. E . imniculata, Sieb. 4. Árbol bajito ó arbusto de 12 á 15' de altura, de ramitas pubes- centes con hojas papiráceas, aovado-lanceoladas, ó aovadas, estre- chadas en una punta estrecha y obtusita, lampiñas, lustrosas supe- riormente y con puntitos transparentes, cuyas nervaduras juntas por la márjen, en donde forman redecilla, algo proeminente por am- bas caras, son largas de 2-3""' y anchas dell{2-8'"; panojas tricóto- mas, pubescentes, con flores pediceladas de 3-4'" de diámetro, cuya central está á veces sésil, cáliz peludo sedoso inferiormente, con 5 lóbulos redondeados, ovario bilocular; baya globosa roja y de 4'"' de diámetro. M. splendens. M. sororia, De. Myrtus siüendens, Sw. Eugenia periplocifoUa, Jaca . Gr. III. Jambosa, Rumph. Primorosas flores purpurinas; árbol de 30' de altura con hojas oblongas, lanceolado-oblongas, ú ob-aovado- oblongas, pecioladas, largas de 6'' á 8" sobre 3, 3 1{2, 4" de ancho, con las venas distantes y formando arcos sinuosos, algo apartados de la márjen ; corimbos laterales paucífloros, con los estambres pur- purinos persistentes, largos de 8-10'" y dos veces mas que los péta- los pronto deciduos; baya turbinada, larga de 3" y otro tanto an- cha por el vértice, color carmesí. ./. onalaccensis, De. : C.T. V. 609. Primorosas flores blancas ; árbol mayor que el anterior, de hojas lanceoladas, aguzadas, pecioladas, largas de 6-8", sobre 2 1^2 á 3" lt2 de ancho, con las nervaduras acostilladas y formando un arco continuo; corimbos terminales paucífloros, estambres T ' lf2 largos y 3 veces mas que los pétalos; baya globosa ordinariamente de 1'" 1];2 de diámetro, blanco amarillento, con olor de rosa. ./. vulgaris, De: C. T. V. 608. G. IV. Eugenia, Mich. 1. Ovario casi tan largo como el tubo cali- zinal, con las celdas ordinariamente multi-ovuladas, 2. — Ovario mas corto que el tubo del cáliz, de celdas biovuladas; árbol bajito y pequeño, lampiño y de hojas papiráceas, oblongas, con una puntita y puntos transparentes, ó por fin opacas, nervaduras sub-acostilla- das y lijeramente proeminentes inferiormente, formando un arco flexuoso y algo distante de la márjen, largas de 4 lf2-2" 1|2 con pe- ciolo de 2-3 "; flores en grupos, sésiles, frecuentemente laterales y pequeñitas; baya globosa de 3-4"' de diámetro. E. cofl'eifoUa, De. Myrciaria ramiflora, Beg. 2. Flores agrupadas, fasciculadas ó racemosas, 3. — Flores ordi- nariamente solitarias ó casi solitarias, precoces, de pedicelos solita- rios ó aproximados , acompañados de una bráctea oblonga, situada por su base, mientras su ápice es bi-bracteolado; árbol pequeño ó arbusto lampiño, con hojas membranosas y por fln papiráceas, ao- vado-lanceoladas, obtusitas, verdes por ambas caras , con puntitos transparentes, y por fin opacas; nervaduras reticuladas con los prin- cipales arcos profundamente sinuosos, largas de 2-1''' li2, sobre 12- 14'" de ancho, con los peciolos de 2'" ; pedicelos largos de 18-8'" y DICOTILEDÓNEOS. CLASE LVIII. — MIRTOÍDEAS. 327 mucho mas que la bráctea; flores ele 6"' de diámetro cuyo cáliz tiene lóbulos liuear-oblongos y obtusitos; ba^'a roja globosa, lonjitudi- Dalmente asurcada y ancha de 4-6'" E . ícnijlora, L. F . Mitchelii, Lam., etc.: C. T. V., 609. 3. Flores agrupadas ó íasciculadas, 4. — Flores racimosas ó co- rimbosas, raras veces acompañadas de flores solitarias ; árbol grande cuyas ramitas sedosas llevan hojas papiráceas y por fin solamente coriáceas, lanceolado-oblongas, eliptical-oblongas, puntiagudas ú obtusitas, con puntitos transparentes, de cara inferior lampiña ó alampiñada, mientras la superior es lustrosa ; nervaduras acostilla- das, lijeramente preeminentes , formando arco flexuoso, largas de 3-4" y anchas de 1-1" 1|2, con el peciolo de 3"'; racimos simples cuyo eje con el pedúnculo es 2-1", sedosos color de orin, 2-4 veces mas cortos que las hojas, pedicelos por pares distantes casi tan lar- gos como los peciolos y de 2-3'", con bracteitas redondeaditas ; flo- res de 4-5"' de diámetro; ovario liso, de celdas con pocos óvulos, baya ob-aovado-oblonga, larga de 6-8"' y ancha de 4"' por el vér- tice E . certiginosa, De. Myrtus ceruginosa, Forsyth. 4. Flores aglomeradas, cortamente pediceladas ó sésiles, los pe- dicelos interiores de ordinario dispuestos en racimitos diminutos, mientras los esteriores son fasciculados, ó todas las flores sentadas, 5. — Pedicelos siempre fascicula:]os y axilares; árbol bajito ó ar- busto, con ramitas pubescentitas que llevan hojas papiráceas y por fin coriáceas, aovadas, con una punta obtusita, provistas de puntos transparentes, por fin opacas, lampiñas, nervaduras lijeramente proerainentes y formando un arco flexuoso, largas de 2-1" y anchas de 10 á 15"', con el peciolo de 1"' ; hacecillos de 2-6 flores, anchas de I'"" 1[2 con pedicelos alampiñados escediendo mucho el peciolo y 2á 3 veces mas cortos que las hojas; anteras ovoideas ; baya glo- bosa, ancha de 2-3"'. E . procera, Poir. E .laruensis^ijv. Myrhcs procera, Sw. 5. Arbusto de ramitas lampiñas, raramente pubescentitas con hojas coriáceas, acuñado-elípticas, obtusas, opacas, lampiñas, ner- vaduras apenas visibles superiormente, lijeramente preeminentes inferiormente, con el arco casi continuo y distante de la márjen, largas de 2-1" con el peciolo de 2-3"' ; grupos lampiños y rara vez pubescentitos, pedicelos tan largos ó mas cortos que el peciolo, los interiores en racimitos, con flores de 3'" de diámetro, bayas globo- sas; anchas de 2-1'" 1[2. E. montícola, De. E. axillaris y fosiida, Eerg. Myrtus montícola, Sw. G. Y. Pi:.iENTA, Lindl., 1. Cáliz 5-lobo; drupa aovado-oblongaú ovoidea, 2. — Cáliz 4-lobo ; drupa globosa ; árbol de 30 á 40' de al- tura, cuyas ramitas comprimidas, sub-tetrágonas y alampiñadas llevan hojas oblongas ó lanceolado-oblongas, lampiñas lubtrosas, coriáceas, con las nervaduras apenas notables por la cara superior, pero distantes y algo preeminentes por la inferior, largas de 6-2", con el peciolo de 5-6'" y anchas de 1, 2 li2, 3"; cimas compuestas corimbiformes, ordinariamente esertas con flores blancas anchas de 3"'; tubo del cáliz tan largo como el ovario. P. vulgarís, AV. A. : C. T. V. 280. 328 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. 2. Drupa aovado-oblonga : tubo calizinal casi tan largo como el ovario; árbol del tamaño del anterior con las ramitas comprimidas sub-tetrágonas, de hojas ob-aovadas, redondeaditas por el ápice, coriáceas, lustrosas, largas de 3" j anchas de 6'", arrolladas por la márjen, con las venas apenas visibles superiormente, mientras son proeminentitas y reticuladas interiormente; cimas cortas mucho mas que los hojas largas de b'" y anchas de 3"'. P. pimento, Gr. Amomis pimento, Berg. — Drupa ovoidea, larga de 6-4'" sobre 3- 2'" de ancho; tubo calizinal mas largo que el ovario ; árbol lampiño de ramitas comprimid o-sub-tetrágonas ó tetráquetras, con hojas ovales ú ob-aovado-redondeaditas, lustrosas, largas de 2-3" sobre 1-1" 1|2 de ancho, de cara superior convexa, con puntitos transpa- rentes esparcidos y las venas algo proeminentes y reticuladas, mientras son lijeramente proeminentes interiormente; cimas ñojas igualendo ó escediendo las hojas. P. acris, W. A. Myrtíis acris, Sw. Myrcia acris, De. Hay dos variedades de esa especie: 1«. Ramitas sub tetrágonas con hojas ovales: Amomis acris, Berg; 2^. Ramitas tetráquetras con los ángulos escurridos'desde la márjen de los peciolos ; hojas ob-aovadas. P. 'pi'^^^cntoides, Greb. Myrcia pi- mentcAdcs, De. Amomis ^nmentoides, Berg. G. YI. PsiDiUM, L. 1. Ramitas comprimido-cilindricas , 2. — Ra- mitas tetrágonas 4. 2. Lampiñas, 3. — Pubescentes con hojas papiráceas, elípticas ú oval-oblongas ; largas de 5-4" y anchas de 2 l|2-2", de cara inferior pubescentita, con las nervaduras acostilladas y proeminentes y las venas reticulado-transversas; pedúnculos ordinariamente con 3 flo- res anchas de 1", cáliz cerrado en el capullo, anteras oblongas. P. polycarpii7n, Lamb. 3. Hojas coriáceas aovadas ú ovalas, redondeadas por ambos es- tremos ó acorazonadas por la base, sésiles ó cortamente pecioladas, largas de 3-1" 1|2 y anchas de 2-1, con las venas apenas notables; pedúnculos con una ó pocas flores anchas de 8"', de anteras redon- deaditas. P. cordatum, Sims. 4. Pubescentes con hojas papiráceas, oblongas ó eliptical-oblon- gas, obtusitas, raras veces lanceolado-puntiagudas , pubescentitas interiormente, con las nervaduras acostilladas, proeminentes, y los nervios transversos, largas de 3-4-2" y anchas de 15-21-6"'; pedún- culos con 1-3 flores grandes de 1" de diámetro, de cáliz cerrado en el capullo, anteras ovales ; bava clobosa, ovala, aovada ó piriforme, larga de 2-1 1|2-1" y ancha de 1-1" 1[2; árbol bajito, de 10 á 15' de altura. G. guara, Radd., etc. : C. T. V., 106. Variedad 1^ de ho- jas lanceoladas ó lanceolado-oblongas, puntiagudas por ambos es- tremos, largas de 2" sobre 6'" de ancho. P. ^;wr/¿i/wm, V. P. fra- grans, Macf. 2^ Alampiñada, con hojas papiráceas, elípticas ó elíp- tico-lanceoladas, lampiñas, con las venas lijeramente proeminentes interiormente, largas de 3-2" 1|2 sobre 1 Í^^l-V de ancho, pedún- culos con 1-3 flores, anchas de 1", de cáliz cerrado en el capullo, enteras, cortamente oblongas, baya globosa, ancha de 4-5'"; árbol alto. P. montamim, Desc. DICOTILEDÓNEOS. CLASE LIX. ENOTERÍNEAS. 329 G. VIL Campomanesia aromática, Gr. Psidium aromaticiim, Aubl. Stenocalyx psei'.do psidiíwi, Berg. C. T. V., 306. G. VIII. Caryophyllus aromatmis, L. : C. T. V., 282. G. IX. Syzygw M jambolamfm, De. : C. T. V., 280. Marlieria 6111 iit'1 c n (tt* Familia 134. — GRANATE AS.— kv\io\iiQ^ ó arbustos de ho- jas simples, alternas, pecioladas, enteras, un poco undulosas por los lados, sin puntitos transparentes; flores terminales agrupadas por á 3 ó 4, formadas de un cáliz colorido, coriáceo, adlierente, de tubo turbinado, con limbo o-^-partido, corola con otros tantos pétalos in- sertos en la garganta del cáliz, elíptico-lanceolados ; hay muchísi- mos estambres, insertos en el tubo calizinal é inclusos en él, de an- teras introrsas, biloculares , aovadas y abriéndose por grietas lonjitudinales; ovario infero, con un doble verticilo de celdillas so- brepuestas, poliovuladas y de cuyo vértice sale un estilo único sim- ple, con estigma cabezudo; el fruto es una especie de baya esférica. Piinica granatum, L. : C. T. V., 107. CLASE LIX.— ENOTERÍNEAS. Familia VSo. — SALICABIFAS, SALWABIACFAS, LI- TRARIEAS, LITRARIACFAS. — Plantas herbáceas anuales ó vivaces, matas y arbustos, de hojas sencillas, enteras ó dentadas, opuestas ordinariamente y á veces alternas, sin estípulas; flores siempre hermafroditas, solitarias y axilares ó en espigas y racimos terminales que constan de un cáliz monosépalo, tubuloso ó urceolado- valvar, con 4-6 segmentos ó dientes; corola con igual número de pétalos algo unguiculados, insertos en la parte superior del tubo ca- lizinal ó en su garganta, junto con los estambres, cuyo número es duplo de ellos ó indefinido; suele faltar algunas veces la corola; ovario libre, simple, multilocular, polispermo, de cuyo vértice sale un estilo único, simple, con estigma cabezudito. Cápsula cubierta por el cáliz persistente, con una ó muchas celdas conteniendo mu- chas semillas asidas por el ángulo interno sin endospermo. G. I. CuFHEA, P. Br.— 1. De 10 á 12 estambres, 2.-6 estambres inclusos, de los que dos son mas largos, de filamentos cortos y lam- piños, yerba anual de tallo difuso, tendido, largode 6á 8'", áspero pu- bescente, con hojas aovadas ú oljlongas cortamente pecioladas, alam- pinadas ó asperitas, largas de 6-4'", puntiagudas ú obtusitas; flores color purpurino pálido, alternas, sentadas ócortamente pediceladas, oblicuamente insertas en la axila, como mitad menos largas que las ho- jas, de cáliz giboso porlabase y laríro de 2-3"\ con dientes diminutos, pétalos 6-7, largos de V" . C . parsonsia, R. Br. : C. T. V., 791. 2. Estambres 12 y á veces 8, con los filamentos velludos, yerba anual detallo en forma de varita, pubescente-viscosa, de 8 á 10" de largo, con hojas aovado-lanceoladas, pecioladas, lijeramente ás- peras, largas de 8-10'", con peciolo de 2-4'"; flores alternas son pe- dicelos juxta-peciolares mucho mas cortos que el cáliz viscoso, con un espolón corto por la base, cuyos dientecitos diminutos son largos de 4'", pétalos morados, cápsula con algunas pocas semillas. C.vis- 330 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. cosissima, Jacq. LytJirum j^etíolatum. Ciiphea melanium, L. — 11 estambres, tallo inclinado, un poco áspero, con ramitas pubescentes, de hojas ovales y oblongas á la par, puntiagudas, asperitas, con la base redondeada; flores alternas, con pedúnculo alado, cáliz peli- erizadiio, corola de pétalos iguales y moraditos, filamentos de los estambres velludos. C. antisifMtica . C. T. V., "791. G- 11. Lavv^sonia inermis, L. : C. T. Y., 335. Familia 136.— iMBLASTOMACBAS. — Plantas herbáceas, matas, frútices, arbustos y árboles, de hojas simples, coriáceas, en- teras ordinariamente ó dentaditas, lampiñas, con la mayor frecuen- cia pubescentes, tomentosas, afelpadas y velludas, opuestas, pecio- ladas, con 3-5-11 costillas lonjitudinales , casi paralelas, muy pronunciadas, délas cuales salen nervaduras transversales y aproxi- madas, lo que les da un aspecto particular característico de esa familia. Flores siempre hermafroditas, de inflorescencia muy varia- da, y que constan de un cáliz monosépalo mas ó menos adherente, de limbo entero ó dentado, otras veces con 4-5 divisiones mas ó me- nos profundas; de una corola con 4-5 pétalos torcidos, de cuyo nú- mero siempre es doble el de los estambres insertos en la garganta del cáliz valvar junto y por debajo de los pétalos, doblados en la es- tivacion de manera que se encorvan por abajo, sea hacia el ovario, sea al fondo del cáliz y ascendentes al abrirse la flor, con anteras anteriores y adheridas al conectivo, ordinariamente abriéndose por poros terminales. Ovario inferior ó adherente al cáliz por medio de líneas lonjitudinales, sepa'-^adas las unas de las otras por huecos á propósito para alojar las anteras durante la prefloracion y que fre- cuentemente desaparecen después; otras veces es libre, con algunas celdillas conteniendo muchos óvulos, de ordinario pegados en el eje de las celdas. El fruto es ó seco y capsular, abriéndose por tantas ventallas septíferas cuantas celdillas tenia el ovario, ó abayado, co- ronado é indehiscente, con muchas semillas reniformes, de embrión recto ó algo encorvado, pero sin endospermo alguno. Análisis dicotómica de las tridus. 1. Fruto abayado mas ó menos carnudo, 2. — í'ruto capsular, 3. Semilla no en caracol, anteras sin conectivo ensanchado, uni ó bi- porosas ; apéndices de ordinario pequeños ó nulos, con ó sin cola, cuando existe está contigua con el filamento. Tr. 1. Miconieas. G. I. LoEEYA arboresceus, Dec. Jlelastoma arborescens, Aubl. OsseaJavescens.'DeG.MelastomaflavescenSyAuhl.—GAl. Clidemia Mrta, Doncl. Crenata, De. Mel. hirta, L., etc. — G. III. Miconia holosericea, De. Melastoma holosericea, L., etc. : C. T. Y., 130. — Semillas no acaracoladas, anteras comprimidas ordinariamente, coherentes por las celdas, conectivo ensanchado, con los apéndices, cuando hay, situados por el lado posterior. T. II. Pixidánteas. BlaJiea laurifolia, jS^aud. BelUicia auMeltii, Naud. 3. Semillas no en caracol, anteras dehiscentes lonjitudinalmente, con los apéndices situados por su lado posterior, cuando existen. DICOTILEDÓNEOS. CLASE LIX. — ENOTERÍNEAS. 331 T. III. Caeianteas. Meriana rosea. Tuss., etc. : C. T. Y., 442. — Semillas acaracoladas, apéndices, cuando liaj, situados sobre el lado anterior de las anteras. T. IV. Lasiándreas. Familia 137. — RISOFORFAS. — Arbustos ó árboles de me- diano tamaño y altura, con hojas simples, enteras, coriáceas, pecio- ladas, opuestas, con estípulas interpeciolares; flores hermafroditas, en espigas ó en grupos axilares ó terminales , formadas do un cáliz supero, monosépalo, persistente, con 4-5 divisiones valvares, de una corola con otros tantos pétalos frecuentemente lacerad itos y con uñas, ó enteros y sin uñas; estambres 8-15 insertos por dentro del cáliz ; ovario semi-ínfero ó libre, simple, con 2-3-5 celdas, con dos óvulos colgantes, de cuyo ápice sale, un estilo simple con estigma bi-partido. Fruto indehiscente unilocular, acompañado por la base del cáliz con una semilla cuya radícula agujerea el fruto para salir por afuera; otras veces es una cápsula 3-locular abriéndose por tres ventallas, sin endospermo siempre. RMzophora mangle ,L. : C. T. V., 160 -'748. — Cassiponrea elliptica, Poir. Familia 138.— ONAGRARIFAS. — Plantas herbáceas anua- les ó vivaces, matas y frútices, de hojas simples, enteras, recortadas ó dentadas, lanceoladas, lampiñas, pubescentes y velludas, sentadas ó cortamente pecioladas, opuestas ó esparcidas; ñores hermafrodi- tas, solitarias ó en grupos axilares; otras veces en espigas ó en pa- nojas terminales, constando de un cáliz monosépalo con 4-5 divisio ■ nes mas ó menos profundas, de prefloracion valvar, adherente, cuyo limbo está casi articulado ó no, de una corola con 4-5 pétalos un poco inclinados lateralmente y de prefloracion torcida, con uñas mas ó menos cortas y pegadas en la parte superior de la garganta del cáliz, con cuyos segmentos alternan; suele faltar algunas raras veces; estambres 4-5 ó 8-10 insertos junto con los pétalos, base de los filamentos á veces acompañada de pelos, granos polínicos reuni- dos por un hilo; ovario inferior de 4-5 celdillas, con muchos hueve- cilios asidos á su ángulo interno, y de cuyo ápice sale un estilo único terminado por un estigma entero ó partido. Cápsula de 4-5 celdas, abriéndose por otras tantas ventallas septíferas, conteniendo muchas semillas sin endospermo y de embrión homótropo. Jussi^A, L. — 1. Tallo derecho ó ascendente, con hojas subsesi- les ó cortamente pecioladas, enteras ondeadas, 2. Tallo rastrero ó flotante vivaz, hojas pecioladas, 4. 2. Cápsula con ángulos obtusos, cilindrica ó linear-prismática. 3. — Cápsula ob-aovada tetragonal ; planta vivaz de tallo fruticuloso, alto de 3-2', ramoso, velludo, pubescente ó alampiñado, con hojas lanceolado-oblongas ó eliptical-oblongas, cortamente pecioladas. con las nervaduras arqueadas y las venas transversas, distantes como de 2'", largas de 4-2"; flores amarilhas, pediceladas de cáliz, con 4 •lóbulos, grandes, aovados, largos de 4-8'" y mas cortos que los pé- talos ob-aovado-redondeaditos y largos de 8-10'"; cápsula larga como los lóbulos del cáliz ó algo mas corta que ellos, cuya base se aguza hasta volverse pedicelo largo de 6-8-3'" /. hirta, W. : C. T. Y., 691. 3. Planta herbácea, lampiña ó áspero-pubescente superiormente, 332 DIVISIÓN SEGUNDA. — FANERÓGAMOS. con hojas lanceoladas ó lanceolado-lineares, aguzándose en peciolo corto, largas de 4-1"; flores cortamente pediceladas, de cáliz con 4 j á veces 5 lóbulos, aovado-lanceolados, puntiagudos, largas de 4-3'", una mitad ó dos veces mas cortas que los pétalos ob-aovado- oblongos; cápsula larga de 1-1 1^2, aguzándose gradualmente por la base, en pedicelo largo de 3-4'". /. migustifolía , Lam. /. salicifo- lia, Ktk. ./. octonervia, De. CEnotliera octonerxia, Jacq. 4. Yerba glabra de tallos tendidos por el suelo en que echan rai- ces ó flotando sobre el agua; largas de 1 á 2', de ramas ascendentes velludas, con hojas espatulado-lanceoladas ú ovales, aguzándose en peciolo delgado, bien enteras, largas de 6'" y anchas de 2 li2; flo- res pediceladas, de cáliz con 5 lóbulos lanceolados, aguzándose, mas cortos que los pétalos ob-aovados, largos de 3-4'"; cápsula obtusa- mente anguloso- cilindrica, larga de 8-10'" y mas que el pedicelo, aguzada por la base. /. repens, L. /. sicartziana. De. /. peploides, Kth. /. ramulosa, Dc.C. T. V.. 692. Familia 139. — COMBRETACEAS. — Arbustos sarmentosos ó no , arbolillos y árboles grandes y corpulentos, con hojas simples, enteras, coriáceas, lustrosas, cortamente pecioladas, alternas y sin estípulas; flores tan pronto hermafroditas como polígamas, en espi- gas ó en racimos axilares ó terminales, que constan de un cáliz ad- herente monosépalo, tubuloso, con 4-5 lóbulos y cuyo tubo parece como articulado en el ápice del ovario; corola con 4-5 pétalos inser- tos entre los segmentos del cáliz valvar, pero suelen faltar ordina- riamente ; estambres por lo común en número doble de los pétalos y alguna vez que otra mas numerosos; ovario inferior simple, uni- locular, con pocos óvulos colgantes del ápice de la celda; estilo sim- ple terminado por un estigma entero. El fruto es una cápsula silici- forme ó una especie de drupa unilocular monosperma por causa de aborto de los demás huevecillos; semillas pendientes y sin endos- permo. Tribu V. — EucoMBRETEAS. — Una corola; embrión de cotile- dones ordinariamente embrazantes ó también juxta-puestos. Com- hretum. Tribu 2. — Termináleas ó MtrobálalNEas. — ninguna corola; embrión de cotiledones generalmente foliáceos y convolutos. G. I.Terminalia,L. — Hojas ob-aovado-oblongas, aguzándose por la base en peciolo largo, alampiñadas ópubescentitas infeiiorraente, casi sin glándulas por la base, largas de 6-12" y anchas de 3-5", aproximadas hacia el vértice de las ramitas, frecuentemente con una glandulita ó un pincelito de pelos en las axilas de las nervadu- ras interiormente, con peciolo largo de 1"; espigas simples ordina- riamente, mitad mas cortas que las hojas, pedunculadas, cilindri- cas, cuya parte superior ocupan las flores masculinas, mientras que por la base están las hermafroditas ; estambres un poco esertos ; drupa elíptica, con una punta, bi-convexa, larga de 1 1|2", de már- jen navicular aguda ; árbol de 80-100' de altura, muy coposo y cor- pulento. C. latifolia, Sw. : C. T. Y., 656. — Árbol de 40-50' de al- tura, cuyas hojas agrupadas hacia la sumidad de las ramitas son acuñado ob-aovado-oblongas, redondeadas ó sub-acorazonadas por la DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LX. — CUCL'RBITÍNEAS. 333 Lase aguzada bi-glandulosa, por la cara inferior alampiñadas, mien- tras la superior es glabra y lustrosa, largas de 5-8" v anchas de 3-4" ; espigas simples, pedunculadas, cilindricas, cuyas flo- res masculinas ocupan la parte superior y las herma froditas la inferior; drupa oval-oblonga, redondeada por ambos estremos, com- primida y con las márjenes prolongadas en alas estrechas y de 1-2'", larga de 1 l\2-2" sobre 1" de ancho. C. catappa, L. G. II. BuciDA, L. — Árbolde30-40' y mas de altura, con hojas ob- aovadas ó espatulado-lanceoladas, lampiñas superiormente, sedosas y alampiñadas inferiormente, largas de 3 á 4" y anchas de 1 1|2 á 2; espigas cilindricas, sedosas ó velludo-pubescentes, con flores sub-distantes de estambres largamente esertos , con anteras acora- zonadas y puntiagudas; drupa seca, pequeña, aovado-cónica, coro- nada por el limbo calizinal persistente, larga de 3"'. B. hiceras, L. B. angustifolia^ De. : C. T. Y., 134. Ucare, Prco. Suministra una goma que participa de las propiedades de la goma arábiga, que puede reemplazar. — Árbol de 40-60' de altura, con hojas espatu- lado ú ob-aovado-oblongas, de cara superior lampiña, mientras la inferior es alampiñada, con vellito color de orin persistente sobre la costilla y la [márjen, largas de 1-1" 1|2 y anchas de G-8'" ; espigas aovadas, largamente pedunculadas, pubescentes, color de orin; lara'as de 8'" v anchas de 3: estambres cortamente esertos, de anteras redondeaditas ; drupa ovoidea, coronada por el limbo calizi- nal, por fin decidua, larga de 6'". B. capitata. C. T. V., 134. G. III. Laguncularia racemosa, Jacq. Conocarpus race7nos7'.s,L. G. IV. CoisocA.'Rvii ser eches, L. C.procumiens, Jacq. :C.T.Y.724. CLASE LX. — CÜCURBITÍNEAS. Familia 140. — BEGONlÁCEAS. — Plantas herbáceas anua- les ó perennes, ordinariamente suculentas, con ramos alternos nudoso-articulados que llevan hojas simples, palmatinervias, ente- ras ó algunas veces palmatílobas , ordinariamente acorazonadas, casi siempre mas ó menos inequilaterales, algunas veces desmedi- adas, articuladas por medio del peciolo, dísticas y alternas, con estí- pulas laterales, mem])ranáceas, libres y caedizas; flores axilares en cimas dicótomas ó en panojas terminales unisexuales, cuyas masculinas constan de un cáliz corolino con 4 sépalos desiguales, siendo los esteriores mayores, planos en la estivacion, aplicados uno á otro y teniendo inclusos los dos interiores alternos, menores y do- blados ; estambres muchos amontonados en el centro de la flor, li- bres ó entresoldados por la base y continuamente terminados en un conectivo obtuso, do anteras estrorsas, biloculares, cuyas celdillas están separadas por el conectivo y lonjitudinalmente dehiscentes. Las femeninas se componen de un periantio corolino también, con el tubo claviforme, tríi)tero y adherente al ovario, de limbo profun- damente 4-9-partido, cuyas lacinias son empizarradas en la preflo- racion, derechas ó patentes durante la floración; ovario inferior 2- 3-5-locular, cuyos tabiques alternan con las alas y las placentas 334 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. proeminentes en el ángulo central de las celdillas, conteniendo mu- chos óvulos anátropos; del vértice salen 3 estilos cortos, reunidos por la base, gruesos, bífidos y terminados por un estigma engrosado, continuo por la base, tortuoso, flexuoso ó ca,bezudo y papiloso. Cáp- sula membranácea coronada del perigonio marcescente, trialada, trilocular, de dehiscencia 3-valvar y loculícida, semillas muchas diminutas, sin endospermo y con el embrión ortótropo, con cotile- dones cortísimos y radícula larga en contacto del hilo y centrípeta. Begonia, L. — 1. Sépalos en número desigual ó diferentes en las flores de ambos sexos, 2. — Sépalos 2 en ñores de ambos sexos ; 3 estigmas cortamente bífidos, con una faja semilunar, contigua y pa- pilosa ; cápsula desigualmente 3-alaüa, con placentas bilameladas; tallo corto con estípulas grandes, deltoídeas, largas de 1|2", hojas muj grandes,. desigual y profundamente acorazonadas, redondeadi- tas, sinuoso-dentadas, pestañosas y con pelo en las nervaduras in- feriormente; las superiores largas de 1', de peciolo cilindrico, esca- moso y largo; ñores en cimas grandes, largamente pedunculadas y de sépalos con 3-4'" de diámetro; alas de las cápsulas obtuso-redon- deaditas, cuya tercera es mucho mayor que las laterales. B. macro- fliylla, Dryand. - 2. Cáliz de las ñores masculinas con 4 sépalos en 2 series, mien- tras el de las femeninas tiene cinco, 3. — Flores masculinas con 2 sé- palos y femeninas con 5; tres estilos bipartidos ó bíñdos, torcidos, con una faja continua y papilosa; cápsula desigualmente 3-alada, placentas bilameladas; frútices de hojas cortamente pecioladas, con estípulas y brácteas persistentes; tallo derecho, anguloso, con pelo esparcido, de hojas oblongas, puntiagudas, lijeramente oblicuas por la base, bi-aserradas, peludas por las dos caras, largas de 2-5" y anchas de 1 1|2-3-3 1{2; estípulas oblongo-lanceoladas, escediendo los peciolos y largas de 6'"; de las alas de la cápsula dos son estrechas y la tercera deltoídea. B. nlmifolia, W. 3. Estigma 2-partido ó 2-fido, torcido con una faja continua y papilosa; cápsulas desigualmente aladas; placentas bilameladas; yerbas suculentas ó arbustos, 4. — Estigmas bipartidos, torcidos, enteramente papilosos; ala déla tercera celda de la cápsula esten- dida y las dos otras reducidas ; placentas enteras; yerbas frecuente- mente fruticulosas y como sarmentosas; ñores en cimas grandes divaricadas; tallo arraigante, trepador, largo de 2-6', ramoso y lampiño, con hojas aovadas ó aovado-redondeaditas, sub-iguales, li- jeramente escotadas por la base, desigualmente dentadas, largas de 3-6" y anchas de 2-3-4" ; cimas pedunculadas desparramadas, cuyas flores tienen sépalos blancos mayores en las masculinas, ao- vados y largos de 2"; tercera ala de la cápsula aovado-oblonga, obtusa, larga y ancha de 8"', estendida; las otras dos cortamente ascendentes y deltoídeas, obtusitas, anchas de 2"' por su parte su- perior. B. scandens, Sw. B. glahi'a, Aubl. 4. Tallo de 2-4' de altura, fruticuloso, algo derecho, lampiño y muy ramoso, con hojas semi-acorazonado-oblongas , aguzadas, an- gulosas y ondeadas, dentaditas, sub-pestañosas, lampiñas por ambas caras, así como los peciolos, largas de 2-3" 1^2 sobre 3[4-l" li2 de DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LX. — CUCURBITINEAS. 335 ancho; flores blancas y coloradas en cimas paucífloras, cuyos sépa- los de las masculinas mayores y ovales son largos de 6'" ; dos alas déla cápsijla son estrechas y redondeadas, anchas de 1"', mientras la tercera, aovado-oblonga y obtusita, es larga de 6-8'". B. acutifo- licCy Jacq. B. jamoicensis, De. — Tallo fruticuloso, derecho y lam- piño, alto de 4 á 5', ramoso y con hojas desigualmente acorazonado- aovadas, puntiagudas, ondeadas, sub-enteras ó algo festoneaditas, enteramente lampiñas, así como los peciolos, largas de 5-4" y an- chas de 2 lf2-2"; cimas abiertas y dicótomas, con flores rosaditas, cuyos sépalos de las masculinas son desiguales, 2 siendo mucho ma- yores, óvalo-redondeaditos, largos de 6-8'" y anclios de 6'"; ala tercera de la cápsula anchamente aovada, B. nítida, Dr^-and. : C. T. V., 618. Familia 141. — CUCURBITÁCEAS. — Plantas herbáceas anuales ó vivaces y entonces con raices bastantes gruesas, perpen- diculares y carnosas, cuyos tallos largos, delgados, ramosísimos y frecuentísimamente velludos y ásperos, están tendidos en el suelo ó volubles y trepadores, siempre con zarcillos sencillos ó ramosos, sa- liendo del lado de la inserción del peciolo ; otras veces son bejucos con tallos mas ó menos leñosos ; hojas simples mas ó menos anchas, casi siempre lobadas, mas ó menos profundamente labiadas ó sinuo- sas, ordinariamente pelierizadas ó sedosas, raras veces lampiñas, siempre alternas y largamente pecioladas, palmatinervias y sin es- típulas. Flores unisexuales, ordinariamente monoicas ó dioicas y raras veces hermafroditas, solitarias ó axilares en racimos ó en pa- nojas terminales ; constan las masculinas de un cáliz monófilo , de forma y tamaño muy variados, pero las mas veces campanudo, con 5 lóbulos ó lacinias mas ó menos largos y cuyo interior y fondo está forado por un disco amarillo; corola monopétala, íntimamente sol- dada con la garganta del cáliz con que está confundida, mas ó menos grande y con 5 lóbulos poco pronunciados; 3-5 estambres insertos en el hondo y centro de la flor, triadelfos, raras veces libres y de filamentos distintos, con anteras grandes, estrorsas ó marjinales, ordinariamente flexuosas y con figura de S, acostadas ó puestas ho- rizontalmente, uniloculares y abriéndose lonjitudinalmente por un surco. Las flores femeninas al contrario, se componen de un cáliz adherente tubuloso, con 5 segmentos ó lacinias, de una corola se- mejante á la de las masculinas é inserta del mismo modo, de un ovario infero con 3 celdas ordinariamente, por causa de las 3 pla- centas enrolladas, con muchos ó algunos óvulos, cuyo vértice está coronado por un disco hepijínico, de cuyo centro sale un estilo grueso, corto, terminándose por 3 estigmas gruesos y bilobados. El fruto es una peponida de forma, tamaño y color muy variados, mas ó menos carnuda, mas ó menos umbligada por el vértice, con tres celdas que con bastante frecuencia desaparecen al madurarse, y entonces las semillas mas ó menos numerosas parecen esparcidas en medio de un tejido celular filamentoso ó carnoso, otras veces es una especie de pixidio con 3 celdas polispermas, de semillas cuya figura, tamaño y color son muy variados, pero ordinariamente com- primidas y orladas mas ó menos, con el epispermo como coriáceo y 336 DIVISIÓN SEGUNDA. — FANERÓGAiMOS. á veces casi como leñosito, cubriendo un embrión grueso, homótro- po V un endospermo. Tribu l^ — Nandiróbeas. — Zarcillos axilares, flores dioicas, con los tres estilos distintos; el fruto es un pixidio con tres celdas cuyas muchas semillas son ascendentes desde la base; bejucos de tailo lleñoso. Fevilea cordi/olia, Sw, : C.T. V., 721. Tribu 2^ — CucuRBÍTEAS. — Zarcillos laterales j juxta-pecio- lares; flores monoicas, dioicas ó hermafroditas, A. Tribu 3\ — SiciEAS. — Zarcillos laterales; fruto con una sola celda conteniendo una semilla única y colgando del apéndice. Se- cMum edule, Sw. C. T. V., 667. A. G. I. CíONANDRA, Gr. — Hojas pubescentitas, 2. — Vejetal lampiño de tallo anguloso, con hojas 3-lobas, lijeramente sub-aco- razonadas por la base, de lóbulos deltoídeos, puntiagudos, dentadi- tos, cuyos laterales son estendidos, anchas de 3", las superiores son mas estrechas, membranosas, lijeramente ásperas ó unidas, con 3 venas transversas y los dientes glandulíferos; zarcillos bífidos ó simples ; flores masculinas solitarias ó en racimos paucífloros abier- tos V de 10'" de diámetro, dientes del cáliz cuyo tubo es turbinado, deltoídeos y pequeños, pétalos anchamente oblongos mitad mas lar- gos que el cáliz, lijeramente tomentosos. C. cuspidata, Gr. 2. Tallo alampiñado, anguloso, con hojas pubescentitas, redon- deaditas, contraidas por la base, mucronadas, cuyas inferiores son 3-5-lobas hasta la parte mediana, mientras las superiores son sinua- do-sub-enteras y anclias de 3-2", las superiores mas estrechas y sub-asaetadas, pecioladas : zarcillos 2-3-fidos ; flores amarillentas arracimadas, distantes y colgantes : en las masculinas los dientes del cáliz son deltoídeos y distantes ; los pétalos aovado-oblongos, tomentosos y tan largos como el cáliz; 3 íilamentos cortos hay: las femeninas, largas de 6"', tienen el limbo calizinal ciatiforme, dimi- nutamente dentadito, mitad de lo largo délos pétalos oblongos; baya ovoídeo-oblonga, roja, larga de 5"' y ancha de 3"'. C. racemosa, Gr.: C.T. V., 545. — Tallo lampiño, anguloso, de hojas alampiñadas, . ásperas, acorazonadas, profundamente 3-lobas, con los lóbulos agu- zados, cuyo mediano es aovado-lanceolado, bien entero, mientras los laterales son anguloso-sinuosos por el lado esterior, anchas de de 5-2", con el seno de la base abierto, pecioladas; zarcillos 3-fidos; flores en racimos paucífloros ó solitarias, cuyas masculinas, largas de 9-12"', tienen el cáliz con dientes subulado-flliformes distantes; baya ovoidea, amarillenta, larga de 8"' sobre 6"' de ancho , con 6 ó menor número de semillas aovadas, comprimido-asperitas y obtusas por la márjen. C. gracüifiora, Gr. : C. T. V., 33. G. II. Momórdiga, L. — Planta abejucada, alampiñada, con hojas profundamente 5-7-lobas, cuyos lóbulos son sinuoso-aserrados, lar- gamente pecioladas, largas de 1 3[4, 2 li4, 2" 1"[2 sobre 1 1{2, 2, 3 de ancho, con el peciolo largo de 3 2[3, 2, 1 1{2". Pedúnculos axila- res filiformes, largos de 2-3", con una bráctea redondeadita entera, situada por encima de la base ó casi hacia la parte media ; flores masculinas con los lóbulos calizinales aovado-lanceolados, mas lar- gos que el tubo y mas cortos que la corola larga de 4 á 6"' ; cáliz de DICOTILKDÓNEOS. — CLASE LX. — CUCUR31TÍNEAS. 337 las femeninas contraído en tubo filiforme por encima del ovario crestado-tnbuloso; fruto oblongo ú elíptico muricado ó tuberculado, largo de lá 5" y ancho de 8" -1" l\2-2".M. clmrantia, L. : C. T.V., 334. De esa especie hay dos variedades : 1*. Lóbulos de las hojas dila- tados, bráctea inserta en ambos sexos menos de 1" por encima de la base del pedúnculo; fruto oblongo, un poco aguzado por el vértice. M. operciilata, L. M.pseiídobalsamina. — 2^ Lóbulos de las hojas di- latados, con dientes obtusitos; bráctea en las flores masculinas in- serta hacia la parte mediana del pedúnculo y por encima de la base en el de las femeninas; segmentos de la corola ob-aovados; fruto elipsoideal-oblongo, puntiagudo, ordinariamente largo de 5 á 6'" y ancho de 1 1[2 á 2" por la parte mediana, con crestas muy salientes y dispuestas por series lonjitudinales, de color amarillo casi ana- ranjado. C. míiricata, W. — Planta alampiñada con hojas profun- damente 5-lobas, con los lóbulos dilatados, sinuoso-dentadas, con un diente cuspidado, largamente pecioladas, largas de 1 3[4, 2" so- bre 2 li4, 2" de anclio ; zarcillos simples: pedúnculos largos de 1 1|2- 2", mientras los de las ñores femeninas son mas cortos, con una bráctea acorazonado- sentadita y cerrada por la flor, con los seg- mentos del cáliz de las flores masculinas aovado-lanceoladas mas largos que el tubo y mitad tan largos como la corola, que lo es de 6-8'" ; fruto elipsoideal, crestado y xuberculado á la vez, largo de 2". M. balsamina, L. G. IILCucuMis, L. Fruto mas ó menos grande y sin púas siempre, 2. — Fruto pequeño ovoideo largo de 1" y ancho de 8'", provisto de púas tiesas y largamente pedunculado, de color blanco algo amari- llento ; planta herbácea anual de tallo delgado, largo, ramoso y rastrero, pelierizada, con hojas profundamente 3-5-7-lobas con los segmentos ob-aovados ó espatulados, obtusos, denticulados, de los cuales 3 son mayores y separados por un seno redondeado; pedún- culos de las flores femeninas largos y delgados ó filiformes. C. an- giiria, L. : C. T. V., 666. 2. Fruto bastante grueso cuyo tamaño y forma varian mucho, aovado ó sub-globoso con 8-12 surcos lonjitudinales mas ó menos pronunciados, con la carne blanco-amarillenta ó amarilla, mas ó menos dulce y aromática ; yerba de tallo tendido por el suelo, muy ramoso, áspero, con zarcillos y de hojas redondeadas, angulosas, largamente pecioladas; flores masculinas con el tubo calizinal sub- ventrudo por la base y dilatado por el vértice; estambres inclusos, de anteras mas cortas que el conectivo ; estigmas 3-4 cortamente bílobos. C. meló, L.: C. T. V., 603. — Frutos oblongos, sub-tríque- tros, casi lisos cuando maduros y lustrosos, largos de 3 á 6", con los carpelos interiormente distintos y hasta separables, verdes, amari- llos, blancos y hasta pintados : tallo herbáceo áspero, con zarcillos, tendido en el suelo y muy ramoso, de hojas acorazonadas oscura- mente 5-]obas, con el lóbulo terminal algo ma3^or, largamente pe- cioladas; flores cortamente pedunculadas, sub-ternadas, grandeci- tas, cuyo tubo calizinal de las masculinas es campanudo con el limbo abierto v doblado hacia abajo; pétalos aguditos. C. sativa, L.:C. T. V.,66G. TO.\io n 22 338 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓG A.MOS. G. IV.LuFFA, Cav. 1. Frutos largos como de 6á8", con ó sin án- gulos y anchos de 2 2" 1|2, mas ó menos lisos j siempre sin púas, ,2. — Fruto ovoideo largo de 1-1" 1|2, con una punta por el ápice y provista de púas que después de seca la fruta se vuelven como agui- joneitos. Planta herbácea de tallo enredadero delgado, muy ramo- so, pubescente, pentágono, con hojas profundamente sinuadas ó acorazonado -arriñonadas por la base, casi redondeaditas, aguzadas por el ápice, terminado en una punta obtusita, sinuadas ó 3-5-loba- das, largas de 3 l[2-4'\ desde la base hasta el vértice y 4 2[3 si se la mide desde la parte mas inferior de los lóbulos prolongados de la base hasta la punta, y anchas de 4" 1|2, con el peciolo 2" l{2-3"; zarcillos bííidoá ; cáliz de las flores femeninas con tubo cilindrico largo de 1" lf2, que después de la fecundación se queda un pico que termina el ovario, pubescente así como él; semillas prietas, óvalo- comprimidas, de base un poco puntiaguda y con 4 tuberculitos oblongos situados dos de cada lado y como apareados, separados por una especie de cresta, vértice obtuso y algo mas grueso que la base. L. purgans, Mart. Popptja opercidata, Roem. Citcumis se- piwn, Mey.: C. T. V., 542. 2. Semillas parduzcas, lisas y ceñidas por una ala estrecha ; tallo larguísimo muy ramoso, delgado, pelierizado, con hojas palmeado- angulosas, de un color verde oscuro, pelierizadas, redondeaditas, con 5 lóbulos dentaditos; largas de 2 li2, 3, 4" y anchas de 4-2"l[2 ; ásperas por ambas caras; espigas masculinas largas de 10, 14, 18", con las ñores grandes ocupando la mitad superior; frutos cilindri- cos ú oscuramente trígonos, marcados de 10 líneas ó surquitos lon- jitudinales, de color verde mas oscuro, á veces provisto de tubercu- litos. L. cyJinclrka, L. : C. T. V., 541. — Semillas prietas, lisas y sin ala alguna, tallo lampiño anguloso, largo y ramoso, con hojas acorazonado-redondeaditas, 5-lobas hasta su 1^3 puntiagudos, áspe- ras ó alampiñadas, largamente pecioladas, largas de 8 á 4" sobre 4-3" 1/2 de ancho zarcillos 3-fidos ó simples á veces; flores de 1" lj2-3 de diámetro con 5 estambres; fruto oblongo, liso y con 10 án- gulos, opérenlo pequeñito y no desprendiéndose espontáneamente L. acutangula. Roxb. G. V. DoYEREA,R. de Gy. Tallo del tamaño del dedo índice lo mas, sin tener la base mas gruesa, con un solo zarcillo siempre, hojas bastante grandes, blanquecino-pubescentes, así como el peciolo es- triadito, de cara superior lustrosa y alampiñada, con 5 lóbulos den- taditos. D. emetocatkartica, R. de Gy. : C. T. V., 496 bis. — Tallo cuyo tamaño alcanza el del brazo de un niño de un año, saliendo de un crecido cónico que ocupa la base y aplicado sobre el suelo en que echa raices bastante gruesas y poco numerosas, de 3-4-6" de diá- metro según la edad del vejetal ; ramitas tiernas, cilindricas, es- triadito-pubescentes y con dos zarcillos por la base de las hojas oblongas y un poco con figurado alabarda, lijeramente ondulosas por los bordes, enteras, puntiagudas por el vértice y acorazonadas por la base, ó mejor con un seno profundo formado por la prolonga- ción de los dos lados de la base ; de cara superior asperita y pelieri- zadita, verde oscuro con lineas mas pálidas que corresponden con DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LXI. — P ASIFLORÍNE AS. 339 las nervaduras muy salientes j pronunciadas por la cara inferior, blanquecino-verdosa j aterciopelada ; de cada lado de la costilla, que es la prolongación del peciolo, salen 3 nervaduras principales muy pronunciadas, alternas, cuyos nervios se anastomosan entre sí y alcanzan hasta la circunferencia; además el vértice del peciolo cilindrico aveces algo torcido, pubescente y estriadito parece divi- dirse y suministrar dos nervaduras que se estienden de cada lado de la base y limitan el seno, saliendo así de la base de la costilla; echan además cada una dos brazos ó nervaduras secundarios, cua^o inferior echa nervios mientras el superior alcanza la circunferencia y echa nervios cuyos superiores se anastomasan con los de la ner- vadura inferior de la costilla y los inferiores con los superiores de su hermano. D. aiigostimensis, R. de Gy. C. T, V., 497. G. Vi. CíONOSicYS pomiformis, Gr. TricJiosanthes pomiformis . C.T.V., 246-841. 1 G. VIL Lage^^auix vul(/aris, Ser. C. T. V., 539. G. VIII. Melotíiria pervaga, Gr. il/. péndula, Sw.: C. T. V., 547. G. IX. Anguria umbrosa, Kth.: C. T. V., 604. G. X. Cnmj Li.\j s vulgaris, Schard. C.edulis, Spach. C.pasteca, Sagret. Cucumis citnUhis , L. C. T. V,, 604. G. XI. Cucúrbita jJé!jf?r), L., y en sus variedades. C. T. V., 665. G. XII. Sicania odorífera, Vellazo. CucurMta evodicarpa, Has- skarl.: C.T. V.,408. G. XIII. Ceratosanthes tulevosa, Spreng. Tricliosantlies tule- rosa, W., y comiculata, Lam.: C. T. V., 215. CLASE LXI. — PASIFLORÍNEAS. Familia 142. — LOASE AS. — Plantas herbáceas ramosísimas que á primera vista parecen trepadoras pero que no lo son en reali- dad, con mucho pelo tieso cuj^a picadura ocasiona con frecuencia, escozor de hojas sencillas, enteras ó lobadas, pecioladas, alternas ú opuestas ; flores tan pronto solitarias y axilares como en racimos terminales, siempre hermafroditas, y constan de un cáliz monosé- palo tubuloso, libre ó adherente, con 5 divisiones y cuya garganta está algunas veces adornada con 5 apéndices ó de un borde recorta- do ; de una corola con 5 pétalos iguales, planos ó cóncavos y algo unguiculados, 5 ó mas estambres: ovario único libre ó adherente, supero ó infero, unilocular, con muchos huevecillos insertos en tres placentas parietales, formando diafragma y situados entre las val- vas y de cuyo vértice salen 3 estilos delgados á veces reunidos en uno solo, terminado por su correspondiente estigma, simples ó con figura de pincelito. El fruto es una cápsula coronada por el limbo calicinal que al madurar se desprende de ella como si estuviese ar- ticulado, y entonces se abre por el vértice desnudado en 3 ventallas por donde salen las semillas algunas veces ariladas, de embrión ho- mótropo alojado en un endospermo carnoso. — Mentzelia áspera, L.: C. T. V. 793. "FamiÜa Ü3. -^ PAPAYACFAS. — Arboles lechosos ordina- 340 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. riamente sin ramas, algo engrosados por la base, coronado su vér- tice por hojas largamente pecioladas, largas, simples, digitado-pi- natífidas y sin estípulas, amontonadamente alternas superiormente; tales vejetales, que crecen con mucha rapidez j viven pocos años, á primera vista parecen como palmeras por su semblante y aspecto general. Flores unisexuales, dioicas, raras veces monoicas y hasta polígamas, cuyas masculinas están dispuestas en racimos compuestos y apanojados, otras veces corimbosos, mientras las femeninas for- man racimitos paucífloros también axilares. Las primeras se compo- nen de un cáliz monosépalo mínimo y 5-dentado : de una corola inserta en el disco, enrodada con 5 lobos de estivacion valvar. Es- tambres 10 insertos en la garganta de la corola é inclusos, de fila- mentos lineares complanados, cuyos opuestos á los lóbulos de la corola son casi nulos, anteras entrorsas biloculares, con celdas pa- ralelas y abriéndose lonjitudinalmente. En el centro se ve un pistilo rudimentario terminado en punta. Mientras las femeninas constan de un cáliz monosépalo libre, semejante al de las masculinas, de una corola con 5 pétalos libres, lineares, insertos en el disco y de prefloracion valvar; pistilo con un ovario libre, único, sentado, aovado-globoso, 1-5-locular, con tabiques completos, muchos óvulos procedentes de 5 placentas parietales y lonjitudinales : estilo termi- nal cortísimo, terminado por un estigma deprimido bastante gran- de, radiado y con 5 lóbulos planos j rasgados por el ápice. Fruto por lo común bastante grueso, es una baya aovado-oblonga con 5 ángulos mas ó menos pronunciados, carnosa, con muchas semillas fijas en las placentas parietales y cubiertas por una membranita fina conteniendo una sustancia líquida , aovadas, rugosas, prietas con tegumento crustáceo cuyo embrión ortótropo está alojado en el eje de un endospermo carnoso, de cotiledones elípticos y foliáceos con radícula corta, rolliza, centrífuga y próxima al hilo. Carica, L. 1. Fruto grande ó solamente del tamaño de una manzana; tallo ordinariamente simple y bastante alto .2. — • Fruto pequeño del tamaño de una nuez; tallo bajito y de ordinario ramoso, como de unos 4-5' de altura y 3" de diámetro, con hojas palmatíñ- das de lóbulos enteros: fruto globoso. C.2)rosopera, L. 2. Flores en corimbos apanojados axilares grandes ; fruto grueso de forma y tamaño bastante variados, aovado, mas ó menos oval, oblongo. Árbol cuj^o tronco se eleva á 15 ó 20', con 4 á 6" y mas de diámetro, con hojas profundamente 7-lobas, cuyos lóbulos son pina- tífidos y puntiagudos, muy grandes y lampiñas, largamente pecio- ladas; panojas masculinas interrumpidas, de flores lar^-as de 1"; fruto largo de6ál0"yancho de 3-5". C. papaya, L.:C. T. Y., 844. — Flores en corimbos simples no axilares, pero sí saliendo déla corteza del árbol y en cualquier lugar : fruto oval algo puntiagudo y del tamaño de una manzana; hojas 5-lobas, cuyos lóbulos mayores son pinatífidos y puntiagudos. C. caiilijiora, Jacq. Familia lU. — PASIFLÓREAS. —Plantas herbáceas viva- ees, matas ó frútices sarmentosos provistos de zarcillos estra-axila- res, de tallos muy largos y muy ramosos ordinariamente y delga- dos, con hojas sencillas, pecioladas, alternas, de figura y tamaño DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LXI. — PASIFLOKÍNEAS. 341 muy variados , enteras, dentadas, recortadas, lobuladas y hasta digitadas y pedaladas, cuyos peciolos mas ó menos largos llevan por su cara superior 2-4-6 í^lándulas de tamaño v figura variados, otras veces están desprovistos de ellas, además su Lase está acompañada de dos estípulas foliáceas cuya forma y tamaño varian mucho. Fio- res hermafroditas de ordinario primorosas, bastante grandes y pin- tadas de mas hermosos colores, solitarias ó en racimos axilares, se componen de un cáliz monosépalo, turbinado por la base, tubulado, con 5 divisiones mas ó menos profundas, de una corola con 5 pétalos insertos por adentro del tubo calizinal y en su parte superior, los cuales suelen faltar algunas raras veces; estambres 5-monadelfos soldados con el ginóforo que pasa por el tubo que forma el andróforo, cuyo vértice lleva o filamentos cortos con una antera puesta al tra- vés, inserta por la parte mediana de su dorso, vacilante y bilocular, la cual da una vuelta para que en el acto de la fecundación su cara corresponda al estigma ; en el intervalo que separa el andróforo de los pétalos se hallan muchos apéndices de forma y tamaño muy va- riados y pintados, formando así una 2-3 series ó coronas que salen del orificio ó de las paredes del tubo calizinal, pero suelen faltar bas- tantes veces. Pistilo formado de un ginóforo largo, filiforme que des- pués de haber atra-vesado el tubo androfórico con que está soldado inferiormente , lleva en su ápice un ovario simple, libre, oval- oblongo, unilocular polispermo, de cuyo vértice salen tres estilos gruesos muy engrosados hacia el vértice que se termina en un es- tigma sencillo, grueso, discoideo, alguna rara vez sentado. El fruto es una baya mas ó menos gruesa, de forma y tamaño muy variados, corticosa, con muchas semillas, cuyo endospermo carnoso aloja un embrión homótropo y central. Pasiflora, L. 1. Flores apétalas, 2. — Flores siempre provis- tas de una corola. 2. Cáliz 5-partido ; corona de 2-3 series, cuya esterior ó las dos esteriores son filamentosas ; peciolos bi-glandulosos ; estípulas linea- res cerdosas ó diminutas; pedicelos solitarios ó fasciculados, con la articulación provista de bracteitas diminutas ó sin ellas es distante de la flor, de cáliz enrodado, amarillento-verdoso, corona pintada de azul ó de rojo, 3. — Cáliz 5-partido, de tubo ciatiforme, corona sub- triseriada, cuya serie esterior está distante del disco, filamentosa, mucho mas larga que la que ocupa la parte mediana : es sub-entera; peciolos bigiandulosos ; estípulas lineares y cerdosas ó diminutas, pedicelos bracteolados en la articulación ; flores encarnadas. Planta velluda con pelo esparcido, con hojas aovadas por la base, aguzán- dose en punta deltoídea, mucronada, sub-enteras ó lijeramente ala- bardada-trílobas, largas de 3-2" li2, 1 l|2-r' de ancho por la base; peciolo largo de 8-6'", con dos glándulas situadas hacia su ápice, estipitadas y pequeñas ; 1 ó 2 pedicelos, largos de 2-1" ll2, cuya ar- ticulación dista 2"' del vértice, mucho mas largos que el peciolo : cáliz color de escarlata, sub-ventrudo por la base, con segmentos li- neares, dos veces mas largos que la corona esterior. baya globosa, negra, mitad mas corta que el ginóforo y ancha de b'" . P . regalls, Macf. 342 DIVISIÓN SEGU^sDA. FANERÓGAMOS. 3. Corteza del tallo corchosa, pero de ordinario lisa, lampiña; ho- jas aovadas, redondeadito-obtusitas superiormente, enteras, largas de 2-1" ll2, peciolo con dos glándulas sésiles, situadas por su parte media ; 2 pedicelos articulados hacia la parte mediana 3-4'" por de- bajo del ápice : cáliz amarillento, ancho de 8-10'" de corona corta;, baya ovoidea, larga de 4"' y casi dos veces mas que el ginóforo, an- cha de 3"\ P. pallida, L. — Alampiñada, corteza siempre corchosa; hojas redondeaditas ó aovadas, con tres lóbulos aovados ú oblongos, rara vez lanceolados, cujo peciolo tiene dos glándulas subaesiles si- tuadas por encima de su parte media ; 1-2 pedicelos articulados, 2"' por debajo de su ápice, cáliz amarillento, de ordinario ancho de 12"' 6-16, con corona corta; baja ovoidea, larga de 5-6-10"' y ancha de 3-5"', casi dos veces tan larga como el ginóforo. P. suberosa, L. 4. Cáliz sin involucro alguno y peciolo sin glándulas, 5. — Cáliz o-partido sostenido por un involucro, 10. 5. Quinqué-partido, de corona con 2-3 series, cuya esterior ó las. dos esteriores sonüiamentosas: estípulas lineares, cerdosas ó dimi- nutas: brácteas diminutas ó nulas, cáliz enrodado amarillento ó verduzco-blanquecino, 6. — Profundamente 5-lobo ó 5-partido, con el tubo campanudo ó ciatiforme ; corona de 1-2 series, cuya esterior inserta por adentro de la garganta del cáliz es filamentosa ó entera, mientras la interior es plegada ó laciniada y cubriendo el disco, 8. 6. Hojas de cara inferior sin glándulas, 7. — Hojas cuya cara in- ferior está provista de glándulas; planta alampiñada, de tallo angu- loso con hojas semi-redondeaditas, apenas 3-2-lobas ú ondeadas por el ápice anchamente trunco; glándulas esparcidas por su cara infe- rior, cuyos lóbulos laterales ó ángulos son estendidos, largas de 2- y 1{2 y anchas de 4-2"; pedicelos simples 2-1 articulados por en^ cima de la parte media. Flores anchas de 10-12"', cuyo cáliz escede la corola blancuzca, con las series esteriores de las 3 que forman la. corona, casi tan largas como los pétalos ; baya globosa, lampiña, mas corta que el ginóforo. P. Mflora, Lam. P. hemicycla, Mey. 7. Suavemente pubescente, con hojas redondeaditas, bílobas, acorazonadas por la base, cuyos lóbulos son estendidos y puntiagu- dos, separados por un seno mucronado frecuentemente, con un ló- bulo rudimentario , anchos de 2-3", pedicelos simples 1-2 articula- dos hacia el vértice llevando ñores anchas de 2-1", cuyo cáliz esce- de á la corola, ambos de color verdoso-blanco ; filamentos esteriores de la corona formada de 3 series, rojizos ó á veces verdes, casi tan largos como los pétalos; baj^a peluda, ovoidea ó á veces sub-globosa, 6-costada y por fin mas larga que el ginóforo, roja, larga de 2" ó mas pequeña. P. riibra, L. P. capsularis , L. P. erubescens, Macf. 8. Cáliz campanudo ó ciatiforme, 9. — Cáliz ciatiforme solamen- te, rojo, corona entera ; planta lampiña con hojas bilobas, ó trans- versalmente oblongas, 3 mucronaditas, cortamente pecioladas, reti- culadas por ambas caras, ojillosas interiormente por causa de glándulas distantes y dispuestas en dos series, con los lóbulos re- dondeados por el ápice, acuñadas ó sub-acorazonadas por la base ; anchas de 2-1" sobre 1" de largo y con peciolo de 4'" ; 1-2 pedi- celos simples, largos de 1-1" 1|2, escediendo mucho el peciolo arti- EICOTILEDÓNEOS. — CLASE LXl. — PASIFLORÍNEAS. 343 culado casi por la parte media y con bracteitas cerdosas y largas ; cáliz carmesí eoliamente ciatiforme mucho mas corto que sus seg- mentos oblongo-lineares; corona tubulosa, entera, trunca j teniendo encerrada la parte inferior del ginóíbro que iguala la flor; baja ovoídeo-frlobosa. larga de 8-10'" y anclia,de 6-8'". JP.mtcmcuja, L.: C. T.V.,^278— 843. 9. Campanudo solamente y verdoso-blanco; corona formada de una serie r2-]4-partida, con los segmentos un poco engrosados por el vértice, de color anaranjado y mucho mas corta que los pétalos ; planta lampiña de tallo estriado, anguloso, con hojas redondeadi- tas, lijeramente 3-lobas por el vértice sinuoso ó trunco, anchas de 3-2'", de cara inferior ojillosa, con glándulas esparcidas y cuyos ló- bulos redondeados y mucrónaditos f,on erguidos ; 12 pedicelos sim- ples frecuentemente elongado-pendientes y articulados por debajo de su parte media; flores blancas, largas de 1-1" 1[2, cuyo cáliz es un poco mas largo que la corola; baya globosa tan larga como el ginóforo y ancha de 10"'. P. peudtdijfora, Bertr. P. rotundifoUa, Sw. — Campanudo ó ciatiforme y rojo; corona filamentosa , de di- visiones lineares, obtusas, mucho mas cortas que el cáliz y aproxi- madas al disco. Planta lampiña, con hojas redondeadito-ovales, en- teras, mucronaditas, cortamente pecioladas, reticuladas por ambas caras, cuya inferior es ojillosa por algunas pocas glándulas; largas de 1" 1|2 y anchas de 12-15"', con el peciolo de 3"' nada mas; pe- dicelos solitarios ; largos de 1" y mucho mas que el peciolo articu- lado hacia su parte media, sin brácteas y racémosos superiormente ; cáliz purpúreo de tubo cortamente ciatiforme de 1'" 1^2 solamente y mucho mas corto que los segmentos oblongo-lineares, largos de 10- 12'" y mas ; los pétalos también son oblongo-lmeares ; ginóforo igualando la flor y dilatado por el ápice; baya ovoídeo-globosa^, larga de 6'" sobre 4-5'" de ancho. P. cnprea, L. P. cavanillessi. De. 10. Grande formado de 3 hojas ó 3-fido, persistente, de divisiones enteras; corona formada de 3-5 series cu^^a esterior es filamentosa; peciolos siempre glandulíferos; estípulas elongadas frecuentemente foliáceas ; pedicelos simples, axilares y no articulados, 11. — Ancho y formado de 3 hojuelas divididas; corona de 3 á 5 series, cuya es- terior es filamentosa ; peciolos con glándulas largamente estipuladas 6 sin glándula alguna; estípulas de ordinario divididas; 1-2 pedice- los simples axilares y no articulados; flores blanquecinas; planta herbácea velluda y glandulíí'era, con hojas redondeaditas 3-lobas ó angulosas acorazonadas por la base ordinariamente, pestañosas, con pelo y glandulitas situadas por la márjen dentadita ó sub-entera, anchas de 2-5"; estípulas multipartidas; 1-2 pedicelos; flores blan- cas con la corona color de rosa, cu3'a serie esterior es mas corta que la corola y la interior entera; cáliz de sépalos oblongos, largos de 1" ó mas cortos igualando los pétalos y mas cortos que el último ó tercer segmento del involucro cuyas tres divisiones ú hojuelas son pinatipartidas, el cual tercer segmento largamente cerdoso se ter- mina en una cbindula; baya ovoidea amarilla, ancha como de 4-3"'. P.fcetida. C.'T. V.,336. 11. Hojas enteras pinatinervias, 12. — Hojas palmatífidas y pal- 344 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. matinervias. Planta lampiña con hojas profundamente 5-7-lohas, cuyos lóbulos oblongos ú obovado-oblongos son puntiagudos y aser- raditos, anchas de 6-4" y largas de *7 a b", cuyo peciolo, largo de 3-2", lleva hacia su parte media dos glándulas alternas y estipita- das y otro par situado cerca de su vértice, escediendo mucho las estípulas deciduas elongado-filiformes ; involucro 3-fido tan largo como la flor, con los vsegmentos aovados, mucronados y bien ente- ros ; corona azul con listas transversas blancas, formada de 3 series tan largas como la corola color de rosa y ancha de 4"; baya globosa y ancha de 2". P. serrata, L. 12. Lampiñas y de tallo cilindrico, 13. — Lampiñas con tallo 4- alado ramosísimo y fuerte, con hojas aovado-redondeaditas, sub- acorazonadas por la base, mucronadas, un poco undulosas, bien en- teras y con las nervaduras arqueadas, largas de 6-3" y anchas de 5, 4 1{2; peciolo con 2-3 pares de glándulas situadas por su vértice 6 por debajo de él, mas largo que las estípulas grandes, aovadas ó aovado-oblongas, largas de 1" y anchas de 8-10" ; involucro for- mado de 3 hojuelas aovadas, puntiagudas, bien enteras y membra- nosas, mas corto que la flor ancha de 3-5-2", con los pétalos y la corola morados, formada de 5 series, cuyas dos esteriores son mas largas que la corola; baya muy grande, larga de 15-10-6", sobre 6, 4, 3" 1\2 de diámetro, oblonga ó elíptica. P. quadrangularis, L. : C. T. V.,377. 13. Peciolo con dos glándulas situadas por el ápice tan largo co- mo las estípulas, espatulado-lineares ; hojas ovales bien enteras, co- riáceas, largas de 4-2" sobre 3, 3" 1[2 de ancho; involucro con tres hojuelas aovadas, obtusas, ondeadas y provistas de unas glándulas grandes y marjinales hacia su vértice , igualando la flor ancha de 2" 1|2, blanca con manchas coloradas, de corona morada con estrias blancas, formada de tres series y tan larga como la flor cuyos péta- los igualan al cáliz y están un poco escedidos por los filamentos es- pesitos de la serie media de la corona; baya ovoidea, amarillenta,* larga de 3" y ancha de 1 li2 2". P. laimfolia, L. : C. T. V., 606.— Peciolo con dos glándulas situadas por encima de su parte media, mas largo que las estípulas lanceolado-lineares; hojas aovadas ó ao- vado-oblongas, puntiagudas, bien enteras, largas de 6-3" ; involucro con 3 hojuelas aovadas , cuspidadas, bien enteras membranosas y pubescentitas interiormente, largo de 1" 1|2, dos veces mas que la flor pintadita y ancha de 3-5" ; corona formada de 3 series cuya media es tan larga como la corola ; baya globosa del tamaño de una manzana regular con una impresión en el ápice. P. onalifcrmis, L. P. ornata, Kth.: C. T. Y., 564. _ Familia \^h. — TURNE RACJS AS. — Plantas herbáceas ó fru- ticulosas, algunas veces sub-frutices y frútices, pubescentes, pelu- das y ramosas, de hojas simples, alternas, sin estípulas , dentadas, rarísimas veces pinatífidas, y alguna vez que otra con dos glándulas situadas hacia el ápice de su peciolo; flores axilares mas veces lejí- timas y de pedicelo libre, otras veces peciolares y de pedicelo reu- nido con el peciolo, unifloro, articulado hacia su parte media y pro- visto de dos bracteitas opuestas, á veces sentadas, y en ese caso se DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LXI. — PASIFLORÍXEAS. 345 hallan hacia la base del cáliz; tales flores, ordinariamente amarillas, constan de un cáliz monosépalo frecuentemente colorido, de tubo cilindrico ó infundibuliforme, sosteniendo un limbo de 5 divisiones aguzadas, iguales y de prefloracion imbricada; de una corola de 5 pétalos insertos en la parte inferior del tubo calizinal, iguales j de estivacion torcida. Estambres 5 insertos juntos con los pétalos y por debajo de ellos, con que alternan j son mas cortos que ellos, de fi- lamentos libres, con anteras biloculares, oblongas, erguidas y abriéndose por la cara interna á favor de una grieta doble ; ovario libre, oval j sub-trígono á la par, de cuyo ápice salen 3 estilos bi- partidos por la base y multífidos por el vértice ; cápsula con tres ventallas, unilocular, abriéndose desde el ápice hasta la parte me- dia de las valvas que se llevan cé>nsigo las placentas multispermas situadas lonjitudinalmente en la parte media de su cara interna: semillas muchas provistas de un arillo muy lateral, delgadísimo y membranoso, crustáceas y reticuladas; embrión sub -encorvado, alojado en el centro de un endospermo carnoso, algo espatulado y cuya radícula se vuelve hacia el hilo, con cotiledones planos y sub- convexos á la par. TuRNEEA, L. — 1. Hojas con dos glándulas por su base, 2. — Hojas siempre sin glándulas; yerba anual pelierizada, alta de 5 á 8", muy ramosa, con hojas oblongo-lanceoladas, inciso-aserradas por encima de la base aguzada, con las venas deslizándose entre los dientes, cortamente pecioladas ; ñores sésiles, largas de 2-3'", color de curtiente, agrupadas en el vértice del peciolo, de cáliz pelierizado, 5-partido, de segmentos lineares, igualando las bracteitas lineares y enteras , encerrando los pétalos arrollados, unguiculados y de limbo redondeadito ; cápsula casi tan larga como las bracteitas, con semillas encorvadas, profundamente hoyosas. T. immila, L. 2. Hojas siempre bi-glandulíferas por la base ; planta vivaz, fru- ticosa, alta de 1 1^2 á 3', con el tallo en varita, derecho y poco ra- moso, pubescente, con hojas oblongas, aovadas ó lanceoladas, agu- zadas, aserradas por encima de la base cuneiforme, pecioladas, largas de 2 lí2, 3, 3" 1|2 sobre 12, 15'" de ancho; pedicelos cortos peciolares; bracteitas lanceoladas, aserradas inferiormente, algo mas largas que el tubo calizinal ; flores amarillas largas de 1" 1|2 y anchas de como 12'", de cáliz profundamente 5-lobo, con segmentos lanceolado-aguzados, un poco mas cortos que los pétalos ob-aova- dos; cápsula mucho mas corta que las bracteitas; semillas cilindri- cas. T. ulmifolia, L. : C. T. V., 278. — Peciolo con dos glándulas por la base, pero que suelen faltar algunas veces. Planta fruticosa, velluda, ramosa y alta de 1 lj2 á 2', con hojas aovadas, obtusitas, bien festoneado-aserradas por encima de su base, cortamente pecio- ladas, de cara inferior aterciopelada, largas de 2-3" solu^e 1 1/2 á 2" de ancho; flores sub-sesiles, libres del peciolo, con las bracteitas lineares, enteras y casi igualando el cáliz pelierizado, 5-lobo, un poco mas corto que los pétalos y largo de 3-4'", cápsula mitad mas corta que las brácteas, con algunas semillas ovoídeo-globosas. jZ*. pafciflora, Benth. T. tomentosa. Kth. 346 DIVISIÓN SEQUNDA. FANERÓaAMOS. ORDEN III. — CICLOSPEEMOS. CLASE LXII. — CACTOÍDEAS. Familia 146.— CÁCTEAS ó NOPÁLEAS. —Plantas car- nosas herbáceas, vivaces, mas ó menos leñosas por el centro , mas ó menos altas y ramosas, trepadoras ó rastreras , arbustos y hasta árboles bajitos, espinosos y hasta espinosísimos siempre, de tallos cilindricos acanalados, estrellados, angulosos ó comprimidos, y en ese último caso compuestos de piezas que parecen articuladas las unas con las otras, con ó sin orden. y simetría, sin hojas ordinaria- mente , otras veces con hojas lejítimas: flores hermafroditas, casi siempre grandes y primorosas, solitarias y esparcidas por los ramos y saliendo siempre de entre las espinas ó al lado de ellas, rarísimas veces en espigas, las cuales constan de un cáliz monosépalo adhe- rente al ovario infero, alguna que otra vez escamoso ó provisto de^ hojitas esteriormente, de limbo partido en muchísimos segmentos ó lacinias desiguales y que van confundiéndose insensiblemente con los numerosísimos pétalos dispuestos en muchas series que forman la corola é insertos en la garganta del cáliz, junto con los estambres que también son muchísimos, de filamentos libres, larguísimos, fi- liformes, inclinados de un solo lado ó derechos, con anteras capila- res; ovario inferior, unilocular, polispermo, de cuyo ápice sale un estilo simple, filiforme, larguísimo, terminado por 3 ó por mayor número de estigmas dispuestos á manera de radios. El fruto es una baya mas ó menos gruesa, de color, forma y tamaño muy variados, cul3Íerta de espinitas muy punzantes ó sin ellas, umbilicada por el vértice, con una sola celda conteniendo muchas semillas pequeñas, pegadas á las paredes, ó de una placenta central, las cuales contie- nen debajo de un epispermo doble un embrión recto ó corvo, sin en- dospermo ó con uno escaso y central. G.L Cereus, Haw. — 1. Tubo calizinal largo, prolongándose mas allá del ovario; estilo tan largo como los estambres inclusos, 2. — Tubo calizinal corto 3^ prolongándose mas allá del ovario, estilo eserto; tallo derecho pareciendo columna y con ángulos verticales; areolas provistas de pelo y por fin alampiñadas. Tallo alto de 6 á 20' y espeso de 2-5", casi simple, obtuso por el vértice peludo, con diez ángulos, preeminentes, obtusos, separados por senos profundos; areolas con 10-8 espinas fuertes, abiertas, cuyas esteriores son mas cortas, largas como de 1", las del vértice del tallo escondidas por pelo ; flores largas de 2", de color rojo pálido y con sépalos esterio- res algo imbricados. C. Swartzii, Gr. Cactus peru^cianus , Sw. C. Jimbriatits, Desc. 2. Tallo con ramas sarmentosas ó rastreras, 3. — Tallo derecho y á manera de columna, alto como de 20', articulado y cuyas arti- culaciones, por fin cilindricas, están aguzadas por el vértice y dis- tantes de 2 3', con 8-10 ángulos obtuso-convexos, cuyos arcólos sin pelo tienen 9-12 espinas, aguijoniformes, largas de 5-2'", mientras las DICOTILEDÓInEOS. — CLASE LXII. — CACTOÍDEAS. 431 del tubo caliziiial lo son de 8'": de tales grupos 8 á 10 son dispues- tas á manera de radios y estendidas, mientras las 2-1 del centro mas largas son rectas ; flores infundibuliformes blancas, largas de 9-6" y abriéndose de noche; tubo calizinal cubierto de pelo largo. C . eriojiliorus , Lk. C . o'epandíis, Macf. Cactus repanclus, L. 3. Ramos mas ó menos angulosos, 4. — Ramos cilindricos con tubérculos dispuestos en 10-12 series longitudinales, con 11-16 es- pinas cortas, de las cuales 8 ó 10 están dispuestas á manera de ra- dios, y 3-4 mas largas, centrales y derechas, largas de 2-3'". Flores color carmesí, infundibuliformes, larcas de 2-3". C. jlagelllformis, Mili. Cactus flagelliformis, L. C. T. V., 839. 4. Ramos triquetros ó con tres ángulos muy pronunciados y como cortantes, separados por un seno casi llano y profundo: arcólos con 2-4 espinas muy cortas, cuya inferior es mas larga y de 1-2'" ; flo- res blancas de 8" de diámetro cuando abiertas, lo que sucede espe- cialmente de noche. C . trian gultiris, Haw. C . triangularis, L. : C. T. Y., 838. — Ramos con 5-7 ángulos, de areolos con 5-12 espinas cortas, casi iguales con el pelo, largas de 2-3"' ; flores grandes blan- cas y desprendiendo una fragancia muy agradable, atiriéndose de noche y de 8 á 10" de diámetro. C. grandijlorícs, HaAv. Cactus graiidifiorus . C. T. V., 48. G. II. Opüntia, T. — 1. Corola mas larga que los estambres que igualan casi el estilo; embrión espiralmente rollado en derredor de un endospermo escaso; piezas del tallo ó ramos llanos, con tuberculi- tos provistos de cerdas, vello y de ordinario con espinas en la axila délas hojas abortas reemplazadas por púas carnosas; flores latera- les, 2. — Estambres esertos mas cortos que el estilo; planta alta de. 4 á 8', ramosísima, con piezas planas enderezadas, prolíferas, ob- aovado-oblongas, areolos muy distantes y por fin inermes y sola- mente con cerda y palos, pero las del vértice de las piezas tiernas tienen unas espinas pequeñas y corvas; flores carmesí cpmo de 2" lo mas de diámetro; de tubo calizinal ob-aovado ; estambres rectos, largos de 12-15"' y el ovario de 1-1" 1|2. C. coccineWfera,'M'úL Cactus coccinellifer , L. : C. T. Y., 663. 2. Tallo derecho, articulado y nunca columnario, echando mu- chas piezas ó ramas derechas y jamás colgantes, 3. — Tallo colum- nario, continuo, espinosísimo, echando ramos colgantes y articula- dos, largos de 4-5', formados de piezas elongadas, oblongo-lineares, largas como de V ; areolos aproximados con 3-4 espinas largas de 2", tiesas y aguijoniformes, flores rojizo-anaranjadas, anchas de 1". O. spinosissima. Mili. Cactus spi)iosissimus, L. 3. Piezas ó artejos formando el tallo, ovales ú oval-oblongas, 4. — Piezas ó artejos con que se compone el tallo, ob-ovales, con areolos distantes y sin esquinas; j)lanta alta de 4-6', derecha, arti- culada y prolífera, con las articulaciones espesitas, larj^as de 4-8",. raras veces con una espina diminuta en los areolos; flores amari- llas de 3-4", con el tubo calizinal claviforme. O. fcifs indica. Mili. Cactus f cus indica, L. C. pseudotuna, Macf. : C. T. Y., 598-664. 4. Yejetal alto de 3-4', articulado-prolífero, con las piezas ovales, largas de 4-8" de areolos distantes con 4-5" ó á veces 6-1 espinas 348 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. fuertes, desiguales, cuyas mayores son largas de 1-1'" \\2, amari- llentas; flores amarillas, anchas de 3-4", con el tubo calizinal ob- aovado. O. tuna, Mili. Cachis tuna, L. — Planta alta de 3-5', dere- cha, articulado-prolífera, con los artejos oval-oblongos , erizados con muchas espinas bravas, largas de 1 lj4-2" y blanquecinas ; arcólos con 1-3-4 espinas tiesas, abiertas y divaricadas ó sub-refle- jas, cuya superior es frecuentemente dos veces mas larga que las inferiores; flores rojizas, anchas de 1" y de tubo calizinal ancha- mente turbinado O. triacantha, Haw. G. III. Rhipsalis. — Tallo largo de 1-2', cilindrico por la base, simplemente ramoso, alado por el vértice, que parece los ramos al- ternos, largos de 6-12", llanos, oblongos ú oblongo-lineares, aparta- damente festoneados y aguzándose por la base estipitado-articulada; flores pequeñas, blanquecinas, anchas de 4"' ; bayas casi negras, ovoídeo-globosas y puntiagudas por la base; de embrión anular j con el endospermo apenas notable. R. sicartziana, Píeifí". Cactus alatus, Sw. — Tallo largo de 1-6', con ramos verticilados ú opues- tos, cilindricos, articulados, colgante y cuyas ramitas largas de 3" son obtusas por ambos estremos ; areolas distantes alampiñadas ; flores blanquecinas pequeñas, anchas de 2", baya blancuzca, ovoídeo- globosa y larga de 2-3"'. Ji. cassj/tha, G. Cactus parasiticus, L. G. IV. Peirescia, Plum. — 1. Flores nunca amarillas, 2. — Flores amarillas y siempre solitarias, saliendo antes que las hojas. Árbol de 15 á 20' de altura, armado con espinas, largas, fuertes, en grupos esparcidos sin orden por el tronco y los ramos largos, estendidos y divaricados. Hojas ob-aovadas, largas de 1" 1|2 y anchas de 8-10'", cortamente pecioladas, con pelo blanco en la inserción del peciolo y una espina solitaria, recta, muy fuerte, subulada y muy punzante, de color como ceniciento, con la punta algo rojiza y transparente. Capullo de las flores piriforme, cuyos sépalos verdes se terminan por una pmitita morada, con pelo blanco por la base. Filamentos de los estambres al abrirse la flor teñidos de morado por el vértice, pero ese matiz no tarda en desaparecer y se quedan anaranjados, mientras la mitad inferior es blanca, de anteras amarillas, basifijas asaeteadas, volviéndose horizontales para verificarse la fecunda- ción ; estilo blanco y amarillento por el vértice, bastante grueso, terminándose por 5 estigmas blancos y glandulosos; fruta amari- llenta redondeada, como de 1" de diámetro; flores exhalando la fra- gancia suave y agradable de la Prímula grandiflora de Europa, lla- mada vulgarmente primavera. P. guyanensis\ R. de Gy. : quizás será una variedad del peirescia bleo^ C. T. V., 600. 2. Flores purpurinas, 3. — Flores blancas dispuestas en cimas flojas y terminales ; árbol como de 15' de alto, cuyo tronco está ar- mado con espinas dispuestas en hacecillos y derechas, de ramos largos y como colgantes, con hojas oblongo-elípticas, largas de 1- 1" 1|2, con 1-2 espinas corvas, situadas por la base pubescente del peciolo, largas de 1-3"' ; pétalos ovales; baya con hojitas estrechas. P. aculeata, Mili. Cactus iwreslúa, L. : C. T. Y., 601. 3. Flores purpurinas solitarias, baya sin hojuelas; árbol del tamaño de unmanzanodelos medianos, con los aguijones morenuzcos; hojas DICOTILEDÓNEOS. CLASE LXIV. CROTONÍNEAS. 349 obaovado cuneiformes, acompañadas de un aguijón solitario, mien- tras que en el tallo son fasciculados. Flores solitarias j terminales, con los pétalos escotados, sub-redondos; fruto globoso retuso , um- bilicado, con muchas semillas negras. P. portulacifolia, Haw. CLASE LXIIL — CRASULÍNEAS. Familia 147. — CRASULACEAS. — Plantas herbáceas ó ar- bustos algunas veces, con hojas carnosas, alternas, sin estípulas enteras ó lobuladas, lampiñas ó pubescentes, mas ó menos peciola- das, de flores ordinariamente cimosas v centrífuíias en la floración, hermafroditas Y que se componen de un cáliz formado de 3 á 20 sé- palos, mas ó menos soldados entre sí por la base, y por tanto multi- partido. Corola con tantos pétalos como sépalos y alternos con ellos, inserta en lo mas bajo del cáliz, frecuentemente monosépala, por haberse soldado los pétalos. Estambres insertos con los pétalos y en número igual ó doble, opuestos entonces unos y alternos otros, mas largos y precoces, cuyos filamentos libres y aleznados llevan ante- ras ovales, biloculares y lonjitudinalmente dehiscentes. Pistilo cuyo ovario es formado de tantos carpillos cuantos pétalos hay y opues- tos á ellos en verticilo ó algo entresoldados y uniloculares, pluriovu- lados, terminados cada uno por su estilo corto y persistente, con su correspondiente estigma; la base de los carpillos está acompañada de escamas nectríferas, algunas veces desvanecidas. El fruto con- siste en folículos interiormente dehiscentes, libres ó raras veces en- tresoldados en forma de caja plurilocular y de ordinario polisperma. cuyas semillas diminutas, de endospermo tenue y carnoso, tienen un embrión recto, con los cotiledones cortísimos y la raicilla diri- jida al hilo. Tribu I. Crasüleas lejítimas ó Eucrasulaes. Carpillos ente- ramente libres y dehiscentes por el ángulo interno BryopJiyllivñi ca- licinum. C. T. V., 662. Tribu II. Crasuláceas anómalas ó Dimóhfeas. Carpillos sol- dados por la base en forma de cápsula plurilocular. CLASE LXIY. — CAPiIOFILÍXEAS. Familia US.— CARIOFILFAS. — Vlsmiai^ herbáceas anua- les ó vivaces, de base á veces fruticulosa, cuyo tallo nudoso y como articulado lleva hojas simples, sentadas, pequeñas, lanceoladas, mas ó menos coriáceas, opuestas ó verticiladas, con ó sin estípulas. Flo- res hermafroditas y raras veces dioicas, solitarias, en cimas ó pano- jas axilares ó terminales, constan de un cáliz monoscpalo tubuloso, cilindrico, mas ó menos vejigoso, con 5 divisiones ó dientes; otras veces formado de 4-5 sépalos distintos; de una corola con 5 pétalos largamente unguiculados, cariofilada; 5 ó 10 estambres hipojínicos, perijínicos y epijínicos; ovario mas ó menos globoso li oval, unilo- cular, con la placenta central, do cuyo ápice salen 2-5 estilos, ter- 350 Dn^rsiON segunda., fanerógamos. minados por un esticrma subulado. Fruto capsular polisperrao, cuyas semillas pequeñas contienen un embrión acompañado de un endos- permo feculento j central. Análisis dicotómica de las tribus. 1. Sépalos nunca libres, pero mas ó menos reunidos por la base ó cáliz monosépalo, 3. — Sépalos libres ó reunidos por la base, "1. — 2. Cinco sépalos libres ó reunidos por la base ; pétalos perijínicos ó nulos; bojas provistas de estípulas escariosas. T. I. Paeoní- QuiEAS. A. — Dos sépalos libres y distintos ó reunidos por la base ; pétalos hipojínicos: hojas un poco espesas, sin estípulas escariosas. T. II. PORTULÁCEAS. B. 3. Sépalos reunidos por la base, form.ando un cáliz 5-partido; apétalos; cápsula plurilocular ; estambres hipojínicos; hojas arro- setadas, con estípulas fugaces ó apenas notables. T. III. Mollují- NEAS. C. — Cáliz 5-partido persistente; flores apétalas; estambres perijínicos; hojas sin estípulas y espesitas. T. IV. Ficoídeas. D. A. Dryiíaria, W. — Yerbecita anual, lampiña, cuyos tallos dé- biles y ramosos se elevan á 1-1' 1|2, cuando están sostenidos por los vejetales circunvecinos, de hojas orbiculares, sub-acorazonadas por la base, anchas de 4-6'"; pedicelos filiformes dispuestos en ci- mas laterales; sépalos aovado-lanceolados, aguzados, lampiños y largos de 1'" 1|2; pétalos profundamente bífidos, inclusos; estam- bres de ordinario 3; cápsula igualando el cáliz, con 2-8 semillas pe- queñitas. D. cordata, W. : C- T. V., 32. — Hojas mas pequeñas, de 2'" de diámetro solamente ; sépalos una mitad mas pequeños que los de la precedente; estambres 2 solamente; semillas menos nu- merosas, I), diandra. C. MoLLUGO. — Yerba anual, lampiña, muy ramosa y alta de 6 á 8", sin hojas por la base, las cuales se hallan dispuestas en roseta en los nudos mas inferiores, espatulado-oblongas; flores en corimbos apanojados, con pedicelos filiformes; estambres 5 ; semillas pequeñas granulosas. M. nicdicaulis , Lam. M. hellidifolia. Ser. Pharna- ceiim spathulatíim, Sw. Ph. hellidifoliiim, Desc. : C. T. V., 602. — Yerbecita anual, lampiña, ramosa, con hojas espatuladas ú ob- lanceoladas y arrosetadas sobre cada nudo , pedicelos unifloros dispuestos en umbela; estambres 3; semillas lisas con 3-5 estrias. M. v^erticilata, L. B. G. T. Talinum, Ad. — Flores blanco-rojizas ó blancas teñidas de rosado, 2. — Flores amarillas. 2. Planta fruticulosa mas ó menos ramosa, alta de 1' li[2 á 2", ó de tallo simple, con hojas alternas ob-aovado-lanceoladas, aguzán- dose hacia la base sub-sentada ; flores en cimas terminales paucí- floras sostenidas por un pedúnculo largo, triangular, pedicelos irí- quetros con flores anchas de 10 á 12'", cuyos pétalos redondeados tienen 6'" de diámetro; estambres como 30 ; estigmas divergentes; semillas diminutamente granulosas. T. triangulare, T . crassifo- liíim. T, frííticosiim , W. Portulaca triangulare. P. crassicaulis, DICOTILEDÓNEOS. CLASE LXV. — L'MBELIFERÍNEAS. 351 Jacq.: C. T. V., 658. — Yerha fruticulosa cuyo tallo derecho, de 1 á 2' de alto, sale de una raíz algo tuberculosa, hojosa hasta su parte media solamente cuando es florífera, con hojas de ordinario opues- tas, largas de 2-2" li2, con el peciolo de li2" y anchas de 1"' li:2 á 2" ; flores de color carmin pálido, en panojas terminales, elongadas sin hojas, largas de 10-15-20", un poco inclinadas por el vértice, formadas de ciniitas dicótomas, con pedicelos filiformes ; sépalos de- cídous , redondeaditos, apicülados ; pétalos pequeños ob-aovados, largos de 3" y anchos de 1 1[2 á 2'", como 15-20 estambres ; semillas muy diminutamente granulosas, T. patens,W. T.fríiticosiom,^ldicL Portulaca 2)atens, P. paniciilatiim, Jacq. C. T. V., 658. G. II.PoRTULACA, Tu. Florcs amarillas, 2. — Flores purpurinas; yerba anual fruticulosa, difusa, con ramos simples, largos de 6-8", con hojas sub-cilínd ricas, aguzadas, alternas, largas de 2-3'", con lana blanca bastante larga en las axilas; flores en grupos terminales cercados de lana blanca, anchas de 8 a 10'"; de cáliz con las di- visiones lineares no aquilladas; pétalos escotados; estambres inde- finidos ; estilo 5-6-partido ; semillas diminutamente granulosas. P. pilosa, L. 2. Yerba anual no fruticulosa de tallo mas ó menos ramoso, alto de 8'' á 18", carnosa, con hojas espatuladas , redondeadas por el ápice, ordinariamente opuestas, con las axilas lampiñas; flores sé- siles, agrupadas ó solitarias, de cáliz con las divisiones aquilladas; pétalos escotados, estambres '7-12 ; estilo 5-partido ; semil'as dimi- nutamente granulosas. jP. olerácea. L. : C. T. V., 657. Variedad con hojas pequeñas, largas de 2-4'", con las axilas á menudo corta- mente peludas. P. parvijlora, ^a.^. — Planta anual fruticulosa, difusa, con muchos ramos fastijiados, de hojas cortas sub-cilíndri- cas, aguzadas, alternas y largas de 2-3"', con las axilas peludas; flores en grupos encerrados en lana densa é involucrados; divisiones del cáliz linear-oblongas no aquilladas ; pétalos escotados; estam- bres como 20; estilo 3 -5-partido; semillas granulosas. P. halimoi- des, L. G. III.Claytonta ciidensis, Don. C. perfoliata, Bd. C. T. V.,659. D. G. I. ^ESij\ivu portulacastrinji, L. : C. T. V., 660. — G. II. Trianthema monogyimm, L.. C. T. V., 661. SECCIÓN IIÍ. - EPIJINOS. CLASE LXV. — ÜMBELIFERÍNEAS. Fajnilia 149. — UMBELTFERsíS ó APIÁCEAS. — Plantas generalmente herbáceas, de tallo hueco y estriado, anuales, bis- anuales y perennes, á veces frútices y hasta arbustos, de hojas compuestas ó descompuestas, mas raras veces simples, alternas con la base del peciolo algo envainadora. Flores siempre hermafroditas, dispuestas en umbelas simples ó compuestas, cuya base se halla fre- cuentemente acompañada de un involucro polifilo, que suele faltar algunas veces, constan tales flores de un cáliz monosépalo, adhe- 352 DIVISIÓN SEGUNDA. FANERÓGAMOS. rente , con limlDO entero ó 5-clentado ; de una corola de 5 pétalos alternos con otros tantos estambres epijínicos. Ovario infero bilo- cular, con un solo óvulo pendiente en cada celda, cuyo vértice está coronado por un disco bílobo de cuyo centro salen dos estilos diver- jentes, terminándose en un estigma sencillo. El fruto es un aquenio doble de figura y tamaño variados, con ó sin alas por fin ó al madu- rarse separándose y colgando del carpóforo filiforme y central ó columna que les* tenia reunidos; de semilla ordinariamente in- vertida adiierida al pericarpio, de embrión alojado en el ápice de un endospermo grande carnoso ó casi córneo. Análisis dicotómica de las suh-órdenes y tribus. 1. Endospermo esteriormente mas ó menos convexo é interior- mente plano. S.-órd. I. Ortospermeas, 3. — Endospermo mas ó menos convexo esteriormente y nunca plano interiormente, 2. 2. Recorvado por los lados al rededor del eje. S.-órd. 11. Cam-pí- LOSPERMEAS, 14. — Encoi'vado de la base al ápice. S.-órd. III. Ce- LOSPERMEAS, 1*7. 3. Umbelas simples ó imperfectas : fruto sin fajas, 4. — ■ Umbelas compuestas ó perfectas: fruto con varias fajas, rarísimamente nu- las, 6. 4. Fruto lateralmente comprimido, mericarpios convexos ó agu- dos por el dorso; hojas siempre simples. T. I. Hidrocotileas. A. — Fruto nunca lateralmente comprimido; hojas compuestas ó sim- ples, 5. 5. Fruto contraído hacia la comisura, paralelamente bisurcado ; mericarpios complanados por el dorso. T. II. Mulineas. — Fruto aovado-ffloboso. T. III. Saniculeas. — Eryngium fatidum, L. : C.T.V.^330. 6. Pauciyugadas, 7. — Multiyugadas. 7. Fruto no lateralmente comprimido ni dídimo tampoco, 8. — Fruto lateralmente comprimido ó dídimo. T. I. Ammieas.- — A- jíium (¡raxeolens, L.: C. T. V.. 265. — Petroselinum sativt^n, Hoíf. C. T. V., 264-152. — Pimpinella anisuní, L. 8. Fruto comprimido por el dorso de los mericarpios, 9. — Fruto no comprimido y en la sección transversal rollizo ó rollicito ó con mericarpios comprimidos por el dorso. T. II. Seselíneas. Fosni- culum vulgare, Goertn.: C. T. V., 2(52. 9. Con rafe casi nunca central, 10. — Con rafe casi central y márjenes de los mericarpios prolongadas en alas libres. T. III. An- gelíceas. 10. Con rafe marjinal y márjenes de los mericarpios prolonga- das en alas soldadas á manera de una sola. T. IV. Peuoedáneas. — Con rafe marjinal y márjenes dilatado-engrosadas, enteras ó ple- gado-dentadas. T. V. TORDILÍNEAS. 11. Fruto comprimido por el dorso de los mericarpios ó... 12. — Fruto algo contraido por los lados de los mericarpios con todas las lomas ápteras. T. VI. Ci'míneas. DICOTILEDÓNEOS. — CLASE LXV. — UMBELIFERÍNEAS. 353 12. Mas ó menos rollizo, 13. — Nunca rollizo, con todas las lo- mas ápteras, las secundarias á veces casi nulas. T. VII. Silerí- NEAS. 13. Casi rollizo , con las lomas primarias sobrepuestas á las laterales debajo del plano comisural, j muchas de las secundarias aladas. T. VIII. Tapsieas. — Rollizo con las lomas primarias sobre- puestas á las laterales en el plano comisural y las secundarias pro- longadas en aguijones libres ó unidos en forma de ala por la base. T. ÍX. Daucíneas. — Daucics carota, L., C. T. V., 267. 14. Multiyugadas, 15. — Pauciyugadas, 16. 15. Fruto cilindráceo, algo comprimido por el dorso de los meri- carpios, con las lomas primarias filiformes y las dos secundarias la- terales, aladas. T. I. Eleoselíneas. — Fruto lateralmente com- primido ó rollizo, con las lomas primarias sobrepuestas á las laterales en el plano comisural, y todas las secundarias prolongadas en aguijo- nes ó cerdas. T. II. Caucalíneas. 16. Fruto lateralmente comprimido ó contraído, prolongado, fre- cuentemente picudo. T. III. EscANDicÍNEAS. — A7ithrisciis cerefo- Imm, Hoff.: C. "f . V., 266. — Fruto hinchado, lateralmente contraído ó comprimido. T. IV. Esmírneas. — Ar acacha esculenta, De. : C. T. V.,214. 17. Fruto lateralmente comprimido y dídimo ó globoso, con las lomas primarias y secundarias ápteras y frecuentemente apenas distinguibles. T. . Coriandeeas. Coriandrum sativum, L. : C. T. V.,163. A. Hydrocotyle, L. Yerba lampiña, de tallo rastrero, filiforme echando raices en el suelo, bastante largo, con hojas abroqueladas por la parte mediana, orbiculares, festoneadas, largamente pecio- ladas, anchas de 15-12-8-6'", con los peciolos largos de 5-4-3-2-1"; pedúnculos casi tan largos como los peciolos, con una umbela de flores en su ápice: fruto didínamo, escotado por la base, con 5 es- trias, cuyas intermedias laterales son apenas notables. B. umlella- ta, L. — Yerba de tallo rastrero y echando raices, con hojas fasci- culadas, acorazonado-redondeaditas ó acorazonado-aovadas, con un seno abierto, festoneado-dentadas ú ondeadas y alainpiñadas, an- chas de 2 á 1" 1|2 y largas de 1" 1^2, con el peciolo peludo y largo de 2-3-4-5" y mas, escediendo el pedúnculo corto, con umbela con- traída formada de algunas pocas flores ó de 1 sola; fruto reniforme, de aquenios con 9 estrias y reticulados ; las 5 estrias son mas proemi- nentes que las demás. H. asiática, L.: C.T. V., 809. — Variedad : hojas acorazonado-aovadas, dentadas ú ondeadas, largas de 2 2 1|2- 1" lt2 y anchas de 1" 3i4 á 1" 1(2, con el peciolo de 7-5-4-3". //. repanda, Pers. H. brevipes, Macf. TOMO II '2ó APÉNDICE r NOTICIA SOBRE LAS ]\IADEPvAS ÚTILES DE LAS ANTILLAS ALGUNAS DE LA REPÚBLICA DE VENEZUELA, CONSIDEEADAS POE SUS APLICACIONES TAN PKONTU A LA ECONO- MÍA DOMÉSTICA Y FÁBEICAS DEL CAMPO, Á LAS CONSTEUCCIO- NES CIVILES Y NATALES , Y ^ADEMÁS Á LA EBANISTERÍA Y AL AETE DE TOENEAE I PEEO TAMBIÉN COMO COMPLEMENTO NECE- SAEIO DE NUESTEA OBEA , QUE CON EL TIEMPO Y UN TEABAJO CONTINUO Y MUY ÁEDUO SE HA VUELTO COMO ENCICLOPE- DIA DE BOTÁNICA APLICADA. Al emprender ese trabajo lo hicimos principalmente en obsequio de nuestros numerosísimos amigos y suscritores que nos habian manifestado el deseo de tenerlo, y gustoso echamos inmediatamente mano á la obra: pero inexperto ignorábamos entonces cuan ardua habia de salir esatarea; en efecto, al llevarla á cabo, hemos ido tropezando á cada momento con dificultades casi insuperables, sea para conseguirlas muestras necesarias, sea para dar de ellas la des- cripción mas satisfactoria posible, porque una sola madera presenta con la mayor frecuencia diferentes aspectos y á veces hasta otro co- lor, según el modo con que haya sido labrada; sus varias edades, la riqueza ó la pobreza del suelo en que se haya criado. y en fin un sin DE LAS MADERAS. 355 número de circunstancias desconocidas hasta ahora. ¿Cuál cosa mas difícil que espresar con palabras sus colores tan variados y ese sin número de matices que un ojo muv ejercido y muy práctico puede solo apreciar, y que sin embargo sirven para diferenciarlas á pri- mera vista, sin que el observador pueda darse razón de lo que ha aprovechado para caracterizarlas así? Además un tinte ó matiz le parece á uno de un color mientras que otro lo percibe de otra ma- nera, y por consiguiente habrá de emplear otras palabras para es- presarlo. Sin embargo, hemos seguido adelante, sin que tales difi- cultades jios desanimen : es verdad que nos han entorpecido y abrumado algunas veces, pero solo momentánea y casualmente; he- mos hecho, pues, todo lo posible para salir bien de tan difícil y hasta fastidiosa pero muy útil empresa. La hermosa colección de maderas perteneciendo á nuestro amigo el señor D. Francisco Sauval, de la Habana, la cual está ahora en el colegio de los PP. Jesuítas de esta ciudad, cuyo eminente director ha tenido á bien ponerla á nuestra disposición, nos ha facilitado mucho el estudio de las maderas de la isla de Cuba ; además nuestro buen amigo y á la vez cuñado el señor D. S. Devenish de la isla de Trinidad ; quien largo tiempo hace se ha dedicado al estudio prácti- co de las maderas de esa isla, de las cuales ha formado una hermosa y numerosísima colección cuyas algunas muestras ya han sido mandadas á Inglaterra para la esposicion universal y han sido muy admiradas ; no solamente ese caballero ha tenido la bondad de po- nerla á nuestra disposición, sino que nos ha regalado un ejemplar de ella y además nos ha participado muchísimos datos interesantes con los que hemos enriquecido esta noticia. Muchos amigos nues- tros, tanto de Puerto-Rico como de Venezuela, nos han facilitado muchos datos útiles sobre la materia ; agradecido, pues, del favor que todos esos señores han tenido á bien dispensarnos, aprovecha- mos esta ocasión para darles las gracias por su benévola coopera- ción. Para esta noticia empleamos el método alfabético, aplicado á los nombres vulgares españoles de las maderas; cuando no los tienen utilizamos los. franceses y hasta los ingleses ; escusado es decir que nunca olvidamos acompañarlos con la sinonimia en esos tres idio- mas y en latin ó científica, pero algunas no han sido clasificadas hasta ahora por no haber podido conseguir sus ñores ni sus frutas tampoco. La letra F que sigue á veces á la sinonimia significa. A- milia, con su número correspondiente, y las letras M. D.— G/, Mé- todo dicotómico en el tomo I, con el número del género en donde se hallará la indicaciojí de la familia en que está el veje tal. A Ácana, jacana, Cba.; ansubo, Prco.; balata, Trd.; purgo, mis, Or." co. — Contrevent, Antilles francaises ; z'os macaque, Trd.; moukey balata, Trd. — Áchras disecta, Forst.; sideroxylon 2^ali- 356 APÉNDICE 1°. d7im; mimmsops dalata, Cruey; m. globosa, G(firtn.,M. D. — G.638. Árbol muy grande cuyo cañón del tronco alcanza hasta 100' ó algo menos de altura, con un diámetro de una vara y hasta vara y media, bastante coposo j cuya fruta comestible cuando madura es muv agradable y sabe como á níspero ; bastante abundante en cier- toslugares de las Antillas como de Costa-Firme. La madera es color almagrado ó parecido al de sangre, casi uni- forme, pero bastantes veces con vetitas paralelas y algo mas oscu- ritas, otras veces son mas pálidas, también con algunas listas apenas pronunciadas y de un tinte oscuro y á veces morenuzco, otras veces son mas pálidas y mas anchas, de corazón á veces color castaño muy oscuro. Es muy sólida, bien dura, pesa bastante, de grano muy fino, contestura fibrosa y bien apretada : es tenida por incorruptible, susceptible de hermoso pulimento. Su peso específico es de 1,049 y del monkey bones de 1,030. Se la suele empiear para tirantes, ar- mazones, etc. y otros usos en las fábricas civiles y también para las construcciones navales ; sirve especialmente para cuadros ele puer- tas y de ventanas, tablones, vigas y por fin estacas de cercados. El árbol llamado contrevent será quizás una variedad del anterior, porque su madera bien pesada, muy dura y también de grano apre- tado y fino, tiene su textura mas fibrosa, su color gris rojizo ba&tante pálido, mas ó menos teñido tan pronto de oscuro como de mas claro, con algunas vetas irregulares y desiguales achocolatado-rojizas que cortan con el foíido bonitamente veteadito y formado como de dibu- jos muy lindos. Abejuelo, Prco. — Ese árbol se produce con abundancia en la parte N. de la isla de Puerto-Rico; su madera es fuerte, de color rosado y se rompe verticalmente ; su altura es de 40 á 50 pies ; el diámetro del tronco llega hasta un pié; su uso común es para es- tanterías de casas. Abispillo, Prco. — Árbol abundante en toda esta isla, que se ele- va como á 40 ó 50' de altura y cuyo tronco llega á tener 12-24" de diámetro ; su madera es quebradiza, de color castaño el corazón, y sus estremos blancos ; se rompe oblicuamente ; sirve para tablazón de casas. Aceitillo liso, Prco. — Ese árbol silvestre, que abunda por el N.- 0. de esa isla, se eleva hasta 50' de altura, y el diámetro de su tronco algo torcido es de 3'. Su madera es muy apreciada para mue- bles. Aceitillo labrado, Prco. — Se halla en los mismos lugares que el anterior, cuya altura y tamaño tiene ; su madera, aun mas aprecia- da también para muebles, es algo mas dura, de color amarillo pri- morosamente veteado y rompe verticalmente. Acetillo. — Esa madera es muy fuerte y muy buena para cons- trucciones y fábricas del campo y casi todas las obras de carpintería que necesitan fuerza; es además bien duradera. Acetunillo, Cba. — Agotoxicum puntatum ? — Ese árbol, que se halla abundante en la isla de Cuba, suministra una madera muy buena para fábricas y construcciones, y por esa razón bastante apreciada. Dicen que sus frutos son venenosos para los cerdos. DE LAS MADERAS. 357 Acoma, mástic, paltiva, Trd. — Sideroxyhím ^nasticliodendron, Jacq.; Biwielia pálida, Sw.; sideroxyliim 2^a¡idnm , Spreng. — Árbol grande j corpulento, que se eleva como á 20 metros de altura, con el tronco largo como de unas 8 á 10 varas, cuyo diámetro es como de 25 á 36", algo mas ó menos. Suministra una madera de buena dureza, de peso algo mas que regular, cuya textura es compacta y el grano bastante fino; de color amarillento ó camuza claro, con ve- tas ó remolinos algo parduscos ó á veces rojizos saliendo de los nu- dos poco pronunciados, de manera que á primera vista su color pa- rece casi uniforme, á veces algo jaspeadito ; es muy sólida y muy apreciada para cualquiera obra de carpintería que necesita fuerza y resistencia á la vez ; se cria en los distritos montañosos. Aceituna, Prco. — Abundante en la parte E. de la isla; ese árbol se eleva á 35 ó 40' de altura, y suministra una madera blanda, color claro, que rompe oblicuamente y sirve para armazón de casas. Aguacatillo, Prco., Cba. — Laurus 'borbonia,'L.\ neclandraleu- cantha, Isees. M. D. — G. 359. — Árbol bastante grande y coposo, que se eleva como á 60' de altura, cuya madera es verde claro ó blanquecina verdosa, de poca dureza y sin embargo bien resistente; bastante liviana; se emplea para cajas, tapabocas y algunas obras de carpintería para el forro de las casas. Su fruto sirve para cebar los cerdos. Aguatacaro, guatequiero, Trd.; guatacare, Gna. — LecytMs ida- timoii. — ' Árbol bastante grande que se eleva como á 40 ó 50' de al- tura, muy común en ios terrenos arcillosos y algo húmedos y da una madera muy buena y muy apreciada, de color pardusco algo acei- tunado, con vetas tan pronto mas oscuras como mas claras, con al- bura mucho mas pálida y tan compacta como el corazón, pero sin nada de aceitunado ni de veteado tampoco. vSu textura es fibrosa é intricable; su grano muy fino y denso ; su dureza mas que regular, y es susceptible de un buen pulimento. Esa madera se emplea para cuadros de puertas y ventanas, para fiechas de carretas ó carruajes, á causa de su resistencia y flexibilidad; conviene pues mucho para todas las obras de carpintería que requieren á la vez fuerza y elasti- cidad. Sirve también para horcones, pero no son muy duraderos, porque en los suelos algo húmedos se pudren en la parte que cor- responde con la superficie del terreno. El tronco de ese árbol tiene regularmente como unas 15 á 24 pulgadas de diámetro, algo mas ó menos. Achiote, Prco. — Bicca orellana, M. D. — G. 890. — Arbolito que se eleva como á 30', algo mas ó menos de altura, de tronco mas ó menos recto, cuvo diámetro lleí?a cuando mas á 8 ó 10" : de madera casi blanca, porosa, liviana, muy blanda, cuyo peso específico es 0,399; que no tiene aplicación ninguna; de color blanco lijeramente amarillento y á la vez algo teñido de rojizo y de matiz casi unifor- me; sin embargo se reparan algunas vetitas lineares algo mas oscu- ritas que corresponden con las zonas concéntricas que so observan en su corte transversal. Aguatapana. — Beef wood, Trd. — Rhopala montana, Schreb.; roupala montana, Aubl. : fam. de las Proteáceas. — Árbol bastante 358 APÉNDICE 1**. común, de mediana altura y tamaño, que se cria en los lugares mon- tañosos y suministra muy Ijuena madera, de color achocolatado ó rojizo, jaspeadito de mas pálido, cuj'o aspecto muj bonito depende del corte que hace manifiestos los muchos radios medulares que con- tiene, y que la hermosean tanto, se parece un poco al palo de rosa y á veces es como salmoneado. Es muy dura, bastante pesada y cuyo peso específico es de 0,945, de testura fibrosa, grano muy fino y apretado ; esa madera, que es de mucha duración, sirve en la isla de Trinidad para horcones y estacas de cercas; se utiliza también para obras de ebanistería, de torneo, y es susceptible de pulimento. Abey hem^bra, Cba. — Pcepigia excelsa, A. Rich. — Árbol muy grande y hermoso, cuya madera no carece de solidez y fuerza y se utiliza por consiguiente ventajosamente en la construcción de las casas. Sus hojas son muy buscadas por los animales, que se las co- men con gusto y son para ellos un buen alimento. No hemos podido conseguir muestra de ella. Agracejo ó cofa, Cba. — Ardisia ciilana, De. — Árbol de mediana altura y no muy corpulento, que se cria en los terrenos bajos y arci- llosos, suministra una madera bien dura y coloreada que se utiliza para fábricas y es bastante apreciada; da carbón muy bueno. No la hemos visto. Agracejo carbonero, Cba. — E xostemma neriifolia. M. D. — Gr. ^\^. — Árbol como de unas 8 ó 10 varas de altura, cuyo tronco al- canza el tamaño del muslo de un hombre bien membrudo, de ma- dera bastante dura y resistente, pero muy poco empleada; se utiliza especialmente para leña y carbón, algunas veces sirve para cercas. No la hemos tenido en mano. ^ Aguedita, Cba. — Picramnia pentandra M. D. — G. 228 lis. — Árbol que se eleva solamente áunos 15 ó 25' de altura, con el tronco del tamaño del muslo de un hombre, algo mas ó menos; sirve sola- mente para leña; pero las propiedades medicinales de su corteza lo hacen muy interesante. Aguacate, Cba., Prco., Yzla,, etc. — Persea gratissima. M. D. — G. 358. — Árbol no muy grande ni muy corpulento tampoco, bas- tante coposo, y que sin embargo se eleva como á 15 varas poco mas ó menos de altura, cuyo cañón del tronco, largo como de 3 á 5 va- ras, alcanza un diámetro de media vara cuando mas; suministra una madera poco pesada, cuyo peso específico es de 0,643, poco du- ra, con grano muy fino y de testura fibrosa bastante floja; su color es rojizo morenuzco ó quizás mejor castaño claro, con vetas ó undu- laciones mxUy poco marcadas, mas visibles especialmente en la parte correspondiente á la albura, mientras que el corazón es jaspeadito de mas páilido y parece como moire, con remolinos desiguales dis- puestos casi simétricamente y con matices diferentes, de manera que los unos son algo mas oscuros y los otros mas rojizos, lo que co- munica á esa madera un aspecto lindífeimo, y sin emlíargo no se uti- liza para nada, que sepamos á lo menos; bien que sea bastante que- bradiza, se la podria emplear, á nuestro parecer, en la ebenistería. La corteza de ese árbol es muy tosca, muy agrietada, bastante es- pesa y de color ceniciento. DE LAS MADEEAS. 359 Akeesie, riz de veau vegetal, Trd. — Bligliia sápida. M. D. — G. 851. — Bien que natural de África, ese árbol se ha aclimatado también en las Antillas j especialmente en la Trinidad, donde lo hemos hallado bastante común, pero á nuestro parecer merece pro- pagarse muchísimo mas tanto porque el arillo de sus semillas es comestible cuanto porque su madera nos parece capaz de reemplazar la del boj de Europa, para ciertas obras de torneo y de ebanistería; tiene casi su color, algo mas blanco, es algo mas liviana y cuyo peso específico es de 0,643 mientras el del boj de Europa es de 0,893 ; pero de grano tan fino, menos dura y un poco menos pesada, con algunas vetitas pardusquitas ; esa madera no se ha utilizado todavía pero nos parece que se podría emplear con ventaja en la ebaniste- ría. Cañón del tronco largo como de 3 á 5 varas y cuyo diámetro alcanza hasta mas de media vara, con corteza rugosa ó mejor áspera, pardasco-verdosita esteriormente y como agamuzada interiormente. Albaricoque de Sto. -Domingo, etc. — Mammea americana, M. D. — G. 876. — Primorosísimo árbol, muy coposo, bastante grande, cuvo tronco, larffo de 3 á 5 varas, alcanza hasta una vara de diáme- tro alo'o mas ó menos, con corteza como cenicienta v algo acTÍetada; suministra una madera de buena dureza, de peso mas que regular, pues que su peso específico es de 0,878, con grano fino y bastante denso; color rojo subido y oscuro á la vez, ó quizás mejor, como achocolatado, con vetitas undulosas algo mas subidas, las cuales dan á esa madera un aspecto particular y como característico ; de corazón mas colarado, algo mas duro y compacto. Estudiada con un lente bueno, se observan en su corte vertical fibras bien marcadas mas ó menos undulosas ; hay muestras que las tienen paralelas; tejido ó testura densa y homojénea, con puntitos ó poros de los cuales algu- nos están llenos de una sustancia como resinosa v son mas oscuros que los demás que ñola contienen; la sección ó corte transversal no ofrece nada de particular sino los puntitos ya señalados y su testura es quizás algo mas compacta ; zonas circulares muy poco notables, pero que sin embargo dan al corazón un color mas subido. Tal ma- dera es muy buena, tiene bastante fama y se utiliza diariamente para carreterías, duelas, horcones, etc. Nos parece á nosotros sus- ceptible de pulimento y podría por consiguiente servir para mue- bles. Alcornoque, Gna. — BowdAcliia xirgilioides. E. 130, s.-f. 1*. — Ese árbol, que hemos hallado con bastante -abundancia en los cha- parrales ó lugares arenosos de la Guayana ; no se eleva mucho ; sin embargo alü'unos mas altos se elevan como á 30' de altura v su tronco, largo de 2 á 3 varas cuando mas, llega al diámetro de 20 á 24" y suministra una madera muy apreciada por ser muy fuerte y muy duradera en la tierra, donde se petrifica en lugar de pudrirse ; su corazón es negro, muy duro y muy difícil de labrar; sirve para horcones de casas. Algarrobo amarillo, Prco.; algarrobo, Cba., Yzla. — Courbaril, Ant. fr. -^ Locust tree, Trd. — Ilymenea courharil. M. D. — G. 1006. — Árbol muy hermoso, muy grande y corpulento que se eleva á como 90' de altura, y cuyo tronco recto, de 8 á 10 varas de largo, 360 APÉNDICE 1*. y mas, llega hasta el diámetro de 6' y aun mucho mas, puesto que Martius refiere haber hallado en las selvas del Brasil algunos alga- robos cuya circunferencia era tal, que quince indios con los brazos abiertos apenas lo podian enyolver. ¿Cuál habia de ser pues la al- tura de ese gigante? Su madera es muy dura, de color amarillento con Yetas verdosas, rompe verticalmente con dificultad, de grano muy fino y denso, muy apreciada tanto por su fuerza y dureza como por su hermosura; su peso específico es de 0,929 ; se utiliza para cualquiera obra de carpintería fina y también para ebanistería, y constituye un ramo bastante importante de esportacion para Euro- pa, donde está muy apreciada para muebles de lujo; en las Antillas se la emplea diariamente para fábricas, para trapiches cuyos cilin- dros y dientes de las coronas se hacen con ella: en fin constituye una de las mejores maderas del pais y de las mas empleadas. Algarrobo colorado, Prco. — A nuestro parecer ese árl^ol no es 'sino una variedad del anterior y como él suministra resina copal, pero se diferencia por el color de su madera, que es rojizo-pardusco bastante claro, con vetas desiguales mas ó menos «"randes v mucho mas oscuras , susceptible también de hermoso pulimento : sirve también para los mismos usos. Alilaila, Prco.; Cinamomo, Cba. — Helia semperTirens. M. D. — G. 941. — Arbolito silvestre que se halla con bastante abundancia y se siembra en las haciendas para hermosear el campo con sus pri- morosas flores que se parecen casi á las del lila de Europa; se eleva á 15 ó 25' de altura, con las ramas largas desnudas porque llevan hojas solamente por los estremos ; el diámetro del tronco es de 5 á 6" ; su madera es de color rosado, algo dura, y rompe verticalmente; en el campo la usan para mangos de espadines y azadones. Almasigo colorado ó blanco, Prco. — Bursera gummifera. — Gommier barriere. M. D. — G. 996. — Árbol abundante de me- diana altura, bien que lo hayamos visto como de 15 varas con el tronco recto, cuyo diámetro llega á 24", poco mas ó menos; su cor- teza parece como barnizada y de un color mas ó menos rojizo, con un epidermis muy delgado, que siempre está desprendiéndose por partes. Madera blanquecina, liviana y casi sin dureza; no tiene aplicación, sin embargo á nuestro parecer se la podría emplear para forro interior de las casas, cajas, etc. ' Almendro de Indias. — Terminalia catalj^CL, M. D. — G., 2*70. — Árbol bastante grande que sirve para paseos, á causa de la dis- posición en paraguas de su copa, el primor de su follaje y la sombra que da; se eleva como á 40 ó 50' de altura, y su tronco bastante recto llega como á unos 24" de diámetro; su madera sin aplicación, de color morenuzco y cuyo peso específico es de 0,699. Almendro criollo, Cba. — Laplacea curtyana. F. Ternstroeme- niáceas. — Primoroso árbol silvestre como de unas 12 varas de al- tura, cuyo tronce largo de 15 á 25', con un diámetro de 12 á 18", sumixistra una madera muy fuerte y bastante dura cuya albura es blanca, mas ó menos teñida de rojo y veteada, mientras el corazón es color almagrado veteado de zonas ó remolinos mas ó menos oscu- ros, á veces bastante notables y otras veces apenas marcados, que DE LAS MADERAS. 361 le dan un aspecto muy bonito. Dureza y peso regulares, testura bastante compacta, grano ni muy fino ni muy grueso tampoco. Su corteza cuando seca es bastante pesada y compacta, como de unas dos líneas de espesor, algo mas ó menos; de cara esterior pardusco- rojiza, con manchas blanquecinas ó cenicientas desiguales y cor- ridas; rugosa y asurcadita lonjitudinalmente; cara interior de aspecto fibroso, lisa y de color como achocolatado mas ó menos jas- peado de blanquecino; la parte mediana, formada por las capas cor- ticales, es bastante densa y compacta, solo las mas interiores son algo visibles y se pueden separar de las demás. Se usan con aprecio los palitos hechos con sus retoños olorosos y con olor de almendras amargas, para mascar y limpiarse la dentadura. La madera de ese árbol, que se halla muy abundante en todos los terrenos de la isla de Cuba, se utiliza ordinariamente en las fábricas de casas, especial- mente para junturas y á veces para vigas. Almendrillo, Cba. — Este árbol, que se parece muchísimo al an- terior, no será quizás sino una variedad suya, de que difiere por te- ner su madera de un color mas encendido. Almendrón, Prco.; cuajaní ó cojaní, Cba. — Noyau, Trd. — Ce- O'asus occidentalis. M. D. — G. 1024. — Árbol silvestre que se eleva como á 15 varas de altura algo mas ó menos, de tronco recto y bas- tante largo, cuyo diámetro llega á 15 ó 18" y suministra una made- ra muy apreciada, bastante fuerte y elástica á la vez. Esa madera, de peso y dureza regulares, es casi color de caoba pálido, ó gris ro- jizo, quizás algo anaranjadito, con vetas lineares paralelas, ó con remolinos apenas pronunciados, otras veces el color es algo mas os- curo sin nada de anaranjado, mas ó menos teñida de rojizo amari- llento; grano y testura bastante finos, observada la testura en el corte vertical, parece bastante fibrosa ; en el corte transversal las zonas concéntricas ó circulares son poco visibles porque van confun- diéndose para formar el corazón ; es muy parecida ala del cerezo de Europa, quizás algo mas oscura; su peso específico es de 0,846; cor- teza delgada, espesa como de una línea escasa, rugosita, casi sin grietas y de color como ceniciento, sobre un fondo canela que es el color de la cara interior ó de sus capas corticales que se separan las unas de las otras con bastante facilidad con forma de fibras; su corte vertical es pardo-rojizo ó algo amarillento. La madera se usa en el campo para estantes de casas, pero á nuestro parecer se la podría utilizar como la del cerezo de Europa, es decir, para la ebanistería y las obras interiores de casas. Arabo, Cba. — Erytliroxylhim havanense. M. D. — G. 950. — Árbol silvestre como de unos 35 á 40' de altura, cuyo tronco llega á 12-18" de diámetro ; se cria en la costa y en la márjen de los rios. vSu madera, de peso y dureza regulares, es de testura fibrosa y sin embargo de grano bastante fino y compacto; corazón de color cas- taño rojizo clarito, de matiz bastante uniforme, alguna que otra vez con algunas pocas vetas apenas pronunciadas ; su albura es blanca teñida de rojizo; no tiene aplicación que sepamos. Su corteza seca es, muy tosca, con grietas loiijitudinales, paralelas, muy desiguales y que se vuelven surcos, reunidas entre sí por otras transversales, 362 APÉNDICE l\ pero sin simetría ninguna, de color achocolatado con manchas ceni- cientas; epidermis bastante espesa; cara interior lisa j fibrosa, también color achocolatado ; con muchas estrías blanquecino-par- duscas que le dan un aspecto particular, producido por las fibras fuertes y separables que constituyen las capas corticales ; tiene como unas dos líneas de espesor. Arara, jucaro, Cba.; ucar, Prco. — Olivier, Trd. — Olivia white, olivia yellow, Trd. — Biicida luceras. M. D. — G. 350. — Árbol grande y corpulento que llega como á 15 y 25 metros de altura, muy coposo y cuyo tronco, bastante recto y largo, alcanza un diá- metro de como 3 á 4', algo mas ó menos; de madera muy pesada, muy dura y muy fuerte, de mucha duración y resistencia, de ma- nera que es muj^ apreciada para obras de carpintería, para fábricas, para carretas, trapiches, etc. Su testura es muy compacta y el grano muy fino, de suerte que á nuestro parecer ha de ser susceptible de pulimento ; su color es como aceitunado, mas ó menos oscuro ó par- dusco, con vetas y undulaciones tan pronto mas pálidas como mas oscuras, pero siempre poco pronunciadas; tiene el defecto de agrie- tarse con mucha facilidad ; su peso específico es de 1,009. Aromo, Cba. ; aroma, Prco. — Vaclieliafarnesiana. M. D. — G. 296. — Árbol bajito, primoroso á causa de su elegante follaje y de sus lincas flores en bolitas amarillas que embalsaman el aire con su de- liciosa fragancia; se eleva como á 6 ú 8 varas de altura, algo mas ó menos, de tronco largo de 2 á 3 varas cuando mas, bastante recto y cuyo diámetro llega á 12 ó 18". Su madera, muy buena y muy sóli- da, bien dura y de peso mas que regular, es de un color almagrado ó rojizo, con zonas ó remolinos tan pronto mas subidos como mas claros, según el modo con que haya sido labrada, su edad y los nu- dos que contiene; su aspecto es muy bonito. Casi todo corazón, por- que la albura, espesa como de una pulgada, es gris claro y amari- llento á la vez, algo veteada; las listas del corazón están separadas las unas de las otras por vetas paralelas, de las cuales unas son al- magro puro, mientras que de las demás, unas son mas claras ó mas parduscas, y algunas hasta de color de hoja muerta, con muchos puntitos ó estrias pequeñitas, lo que es de un efecto muy lindo ala vista. En el corte transversal, las zonas concéntricas, color almagro mas ó menos subido, aparecen mas pronunciadas y desiguales : su peso específico es de 1,117. Corteza muy delgada, como de una línea escasa, no muy agrietada, rugosita y color gris ceniciento, algo lus- trosa. Se podría utilizar esa madera con mucha ventaja para las obras de carpintería que necesitan á la vez mucha fuerza y una du- reza regular; además, á nuestro parecer, podria servir para mue- bles, que saldrían muy lindos. Aroma uña de gato, Cba. — PitJiecolodium unguis cati.M.D. — G. 295. — Árbol mas pequeño todavía que el anterior, que se cria en los arenales de las Antillas ; se eleva como á 3 ó 4 varas de altura, de tronco bastante torcido y poco largo, y del tamaño del muslo de un hombre fuerte. Suministra una madera muy fuerte, muy resis- tente j de un aspecto particular, casi pareciéndose á la de la prece- dente. Puede utilizarse del mismo modo y en los mismos términos. DE LAS MADERAS. 363 Ajua macho ó amarilla, ayuda hembra ó blanca, Cba.; ceniza ó cenizo, Pico.; mapiirito, Trd., Vzla. — Epineux jaiine, Trd., Ant. fr. — ZanioxyUíim coriaceum, lomhacijolmm.jvglandifülium, ¡an- ceolatíiin , fraxineiim , etc. M. D., G. Íí34. — Arboles grandes y co- poso?, especialmente el zantoxilo masa de hércules, que llega como á 15 ó 20 metros de altura ó algo menos, según la et'pecie, j cuyo tronco recto, espinoso y bastante largo, llega á 24-30", ali-o mas ó menos, de diámetro. De madera blanca teñida de aínarillo pálido ó de amarillento, que al airese vuelve poeoá poco mas pálido, pero no desaparece enteramente, con vetas ú ondulaciones algo mas subidas y que á veces parecen tener tendencia para teñirse de pardusco claro, y corresponden con las zonas circulares bien notables que se reparan en su corte transversal; su aspecto es muy bonito y como moiré. De testura fibrosa, grano no muy fino, dureza mediana y bas- tante liviana, bastante fuerte : ?e aplica á la construcción de casas de campo; su peso específico es de 0,380. Su corteza seca es par- dusco-achocolatada y con surcos desiguales y, verticales, rugosa y cubierta de liqúenes, espesa como de unalíneay media, mas oscura interiormente; cuando verde y adherida al árbol está armada de aguijones mas ó menos gruesos, según las especies, porque hay al- gunas que son inermes. Azucarero de montaña, Cba.; tabanuco, Prco. — Gommier de montagne, Gpe., Mque. — Iledivigia balsamifera, M. D. — G. 997. — Árbol silvestre que se cria en el centro de las Antillas y se eleva como á 15 ó 20 varas de altura, de tronco recto, largo y cuj-o diá- metro llega á 5 cuartas, algo mas ó menos; deja salir por las grie- tas naturales ó las heridas hechas á propósito en su corteza, una resina blanca muy aromática. Su madera bastante liviana, de du- reza regular, testura fibrosa y grano bastante fino, es de color como rosado, ó quizás mejor como gris teñido de color de carne pálido y algo amarillento, cuyo matiz no es uniforme; en efecto, la parte mas interior del corazón es lamas rosada, jaspeada de mas blanco ó ve- teadita, las grandes listas que se ven acercándose á la albura, la cual es color blanquecino con matices morenito-rojizos, están mas teñidas de moreno pálido y separadas las unas de las otras por vetas mas ó menos undulosas, de un color mucho mas pardusco y que contrasta bastante, mas ó menos pronunciadas y pocas, con remo- linos de agradable efecto producidos por los nudos; se ven en ella además muchífcimos puntitos que pare(?en mas oscuritos y la hacen mas hermosa todavía. Es bastante fuerte, resistente y bien apre- ciada, porque además de ser bonita dura mucho, pues los insectos no la pican á causa de la resina que contiene ; se la utiliza para forrar interiormente las casas y otras obras de carpintería fina. Ausu.— Árbol silvestre que se produce abundante en la parte N. O. de la ibla de Puerto-Rico y se eleva á unos 35 á 40' de altura, con el tronco grueso de 10 á 12"; su madera es muy fuerte, de color amoratado el corazón y blancos los estremos, rompe verticalmente, es á propósito para estantes de casas. Auíubo. (Véase ácana.) — Añadiremos alo dicho ya en el párrafo citado, que en la maestranza militar de San Juan de Puerto-Rico 364 APÉNDICE lo. emplean esa madera en rajos de rueda, ejes de carruajes, durmien- tes de esplanada, etc. En obras particulares, se emplea en vigas de casas, estanterías, alfajías, etc. B Baga, palo bobo, Cba.; guanábano cimarrón, cavure, corcho, Prco. — Cork wood, alligator apple tree, Trd., Jque. — Manin, Gpe. — Anona 2)ahistris. M. D. ■ — G. 900. — Arbolito alto como de unas 8 á 10 varas lo mas y el diámetro de su tronco llega solo á 10 ó 12 pulgadas ; de madera muy liviana y muy blanda, con testura fibrosa y grano ni muy fino ni muy grueso tampoco; color gris ó pardusco claro, algo teñido de verdusco, de aspecto lustroso y á la vez como jaspeadito, pero con la esposicion larga al aire se vuelve blanco su- cio; su peso específico es de 0,175 para las raices. Se emplea en el campo en balsas para transportar ó conducir efectos; la madera que proviene de las raices que se han desarrollado en los terrenos pan- tanosos es sumamente blanda y porosa, de manera que se usa en Cuba para alisar las navajas de afeitar y reemplazar el corcho. Baria, Cba.; capa prieto, Prco.; pardillo, Trd., Gna. — Bois de rose, Ant. fr. — Cordia gerascantoicles, Cyp., Trd. M. D. — G. 607. — Ese árbol, que se eleva hasta 60' de altura y cuyo tronco llega solamente á 18" de diámetro, suministra una madera muy apreciada por ser á la vez m.uy fuerte y algo flexible ó elástica , de buena du- reza y de peso mas que regular; testura fibrosa, grano fino y com- pacto, de corazón muy duro, color castaño oscuro, hermoseado con vetas mas pálidas y á la vez mas rojizas, mientras la albura es de color gris, amarillento pálido, con vetas lineares mas oscuritas; susceptible de buen pulimento y después de barnizada se vuelve muy hermosa. Su peso específico es de 0,574 ó 0,752. En la maestranza militar de San Juan de Puerto-Rico se aplica esa madera en cabrias, cureñas, avantrenes, carros fuertes de sitio, de mano, juegos de ar- mas, etc. En talleres particulares hacen puertas, persianas , barras de catres y de carruajes, ligazones de fábricas, cajas de colmenas, barriles, etc. Las abejas apetecen sus fiores olorosas, y el ganado vacuno y de cerda sus frutos. Bariaco , Prco. — Bois rouge. — Reedwood, Trd. — TricJiiUa mosclioxylum. M. D. — G. 932. — Árbol silvestre bastante abun- dante, que se eleva como á unos 30' de altura y cuyo tronco llega á 18" de diámetro; suministra una madera bastante apreciada para obras de carpintería del campo, buena especialmente para fábricas de casas, estantes, vigas, tablas, etc., muebles j algunos instru- mentos de música; bien fuerte y muv resistente, de testura fibrosa y sin embargo bien apretada, grano fino; color gris rojizo discipli- nadito ó lijeramente matizado de amarillento, quizás mejor, salmo- neado-pálido, con algunas vetas mas oscuritas ó mas claritas; ail)U- ra muchísimo mas pálida j apenas rojiza, pero de igual aspecto general; en el corte transversal el color es mas pronunciado; las DE LAS MADERAS. 365 zonas concéntricas bastante visibles y el grano mas compacto; su jaspeado proviene de los muchísim^os vasos abiertos al labrarla, y además de la presencia de muchas manchitas desiguales y transver- sales, de color almagrado y que no son sino los radios medulares. Corteza espesa como de %'" , bastante compacta, unida y sin grietas, poco rugosa por consiguiente, color ceniziento oscuro, con man- chas, de las cuales unas son blanquecinas y las otras morenas; epidermis fino y adherente ; capas verticales color de canela .oscuro y casi achocolatado; no se rompe con facilidad, bien que su rotura no sea fibrosa. Baria carbonera, Cba. — Madera de buen peso y cuya dureza es regular ; su color es blanco amarillento algo teñido de anaranjado y veteado á la vez ; no raramente con nudos, de un hermoso color prieto; en el corte transversal se ven las zonas circulares bastante pronunciadas ; con el lente el tejido parece bastante flojo y entre- mezclado de muchísimos radios medulares capilares; testura fi- brosa. Bayua, Cba. — Hermosa madera, bastante liviana y poco dura, cuyo corte vertical es fibroso y lustroso, de color agamuzado con vetas algo mas amarillentas, de aspecto como sedoso y muy agrada- ble á la vista; el corte ó sección transversal, al contrario, parece solamente amarillento con zonas concéntricas mas subidas y bas- tante apretadas las unas contra las otras ; el corazón es color aga- muzado y en su centro se repara el canal medular; testura fibrosa, grano fino y bastante compacto. Nos ha parecido susceptible de pu- limento, y después de barnizada se vuelve muy hermosa, sus vetas y su moere sedoso haciéndose entonces mas manifiestos y visibles. Bibona, Cba. — Aralia capitata. — F. Araliáceas. — Árbol me- diano como de unas 3 á 5 varas de altura y del tamaño del muslo su tronco, que suministra una madera de peso regular y dureza sufi- ciente, cu3'o color es blanco-amarillento ó como teñido de agamu- zado, con vetas lineares verticales algo mas oscuritas. algunas ve- ces tiene nudos, de los cuales salen vetas mayores ó remolinos que se estienden mas ó menos; de testura fibrosa, grano fino y compacto; en el corte transversal las zonas concéntricas son muy visibles, y bien que lineares hacen el color de esa parte algo mas subido. Cor- teza seca muy livianita, color gris blanquecino algo sucio, con man- chas cenicientas, siendo algunas parduscas y hasta negras, con una línea de espesor; el corte vertical como el transversal, la muestran bastante dura, compacta y de color achocolatado; la cara interior es de color de chocolate ó castaño claro. Bigueta del Perú, Cba. — Myrospermum pendferum. M. D. — G. 1008. — Árbol de como unas 10 ó 15 varas de altura y cuyo tronco llega á 18-24"de diámetro, poco abundante y hasta bastante escaso en la isla de Cuba; suministra una madera de peso y dureza muy regu- lares ; su corte vertical es de un color gris aceitunadito, lustroso y como moere, á veces con nudos prietos; no tiene corazón bien mar- cado, de manera que su color es casi uniforme, alo menos así es por la muestra que tenemos á la vista; en el corte transversal se repa- ran las zonas circulares concéntricas algo mas oscuritas y que for- 366 APÉNDICE 1°. man las vetitas ya mencionadas, con el centro mas prieto y teñido de rojizo. Examinada con el lente parece muy compacta, y sin embarp:o fibrosa, con el- grano fino, pero se reparan en ella muchos poritos separados los unos de los otros por muciios radios medulares capila- res: es de mucha dureza y de peso regular. Hemos tenido en mano otra muestra menos jaspeada, cuyo color era mucho mas subido, con algo de pardusco y las vetas mucho mas prietas, lo que prove- nia sin duda dé la edad mayor del árbol de donde habia sido sacada la muestra. Tal madera nos ha parecido susceptible de buen puli- mento, y después de barnizada se vuelve muy l3onita y con reflejos como doraditos y sedosos que le dan un aspecto particularr y muy agradable á la vista. Nos parece que se emplearla con mucha ven- taja para muebles y obras de ebanistería ó de carpintería fina. La corteza seca es bastante delgada, rugosa, de un color ceniciento su- cio, espesa como de una línea solamente, bastante compacta; su corte vertical es como achocolatado, de cara interior lisa, color par- dusco teñido de rojizo, con vetas mas claras y hasta blanquecinas. B]jaguara, Cba.; palo mabí, Prco. — Bois mabi , St-Tmas; bois costiére, Trd., Ant. fr. — Colubrijia reclinata. M. D. — G. 1145. — Árbol pequeño cuya madera, de buena dureza y bastante fuerte, sir- ve á veces en Cuba para construcciones ; no hemos tenido en mano ninguna muestra de ella. Su peso específico es de 0,947. Bois cotelette, Trd. — Elisia. — Árbol silvestre bastante crande que se eleva como á 12 ó 15 varas de altura, y cuyo tronco largo de 5 á 6 varas, algo mas ó menos, bastante recto, llega á 10 ó 12" de diámetro, poco mas ó menos, pero con mucha albura; en efecto, hemos visto ramas á lo menos del tam^año del muslo no tener cora- zón ninguno ó muy poco; la madera es de peso regular, no muy li- viana sin embargo, de testura fibrosa y bastante apretada, grano fino y dureza bastante regular, cuya albura es color gris blan- quecino, matizada de pardusco amarillento, con vetas mas oscuritas casi paralelas, á veces un poco undulosas, contrastando con el cora- zón, cuyo color es de un hermoso gris pardusco algo disciplinadito de morado; susceptible de pulimento. Bien apreciada y diariamente empleada para obras de carpintería, especialmente para el interior de las casas. Corteza muy delgada, de color ceniciento, casi café con leche, y que se desprende por capas desiguales. Boj de Persia, Cba.; café de la India, Prco. — Murraya exótica. M. D. — G. 866. — Aunque ese primoroso arbusto sea natural de las Indias orientales, se ha naturalizado en las Antillas v en el con- tinento americano, y se halla en la mayor parte de los patios y de los jardines, que hermosea á la par que embalsama el aire que se respira en las casas con la deliciosa fragancia de sus flores. Se eleva como á 3 ó 4 varas cuando mas, con el tronco bastante recto y que llega á veces al tamaño del muslo, pero ordinariamente es un poco menor; suministra una madera que se parece muchísimo á la del boj de Europa, que á nuestro parecer podría reemplazar perfec- tamente; es de un color amarillento pálido, con el corazón algo par- dusco, tiene vetas paralelas y á veces undulosas; de buena dureza y de peso mas que regular; testura y grano muy finos y densos, bien DE LAS MADERAS. 367 fuerte y muy sólida, buena para obras ele torneo j susceptible de pulimento. Su peso específico es de 0,979. Boje ó quina, Prc. — Coiitarea coccínea. M. D. — G. 714. — Ár- bol silyestre que se halla con bastante escasez por el N. O. de la isla de Puerto-Rico, no muy alto, pues no se eleva á mas de 15 á 20 va- ras de altura, con el tronco recto, que llega á 18" ó 2' de diámetro ; suministra una madera de buena dureza, de buen peso, muy fuerte j muy apreciada para las fábricas del campo y también para obras de carpintería, muebles y armazón de casas; es 'de color amarillo, quebradiza y se parte horizontalmente. Brasil, palo del Brasil, Cba.; brasileto, Prco. — Coesa^pinici M- juga. M. D. — G. 916. — Árbol pequeño que se produce por las cos- tas, como de 3 á 5 varas de altura, y cuyo tronco llega á 18" de diámetro; madera muy compacta, muy dura, de color rojizo ana- ranjadito oscuro ó algo abermejado, teñido de anaranjadito y vetea- do; rompe verticalmente, pero con dificultad, por consiguiente es muy resistente; corteza bastante espesita. Se utiliza en Europa para teñir y sirve además para tornear y para hacer cajas de violin. Brasil de costa, Prco. ; brasilete colorado ó palo de Fernambuco, Cba. — Brasil wood, Trd. — Ccesalpinia crista. M. D. — G. 916. — Árbol mas grande que el anterior ; se eleva como á 30' de altura, su tronco, tortuoso y nudoso, llega como á 25" de diámetro; madera bien compacta, dura, pesada, fuerte y de color mucho mas oscuro que el precedente, sirve para iguales usos y además se utiliza en Puerto-Rico para tablas, cuartones y vigas para casas de campo. G Cabalonga, Cba., Prco.; caruache, Gna.; retama, Pto. Cllo.; quachi quacha, Trd. — Thevetia nernfoUa. M. D. — G. 610. — Arbo- lito como de 10, 15 ó 20' de altura, bastante coposo, y cuyo tronco, largo de como dos varas, algo mas ó menos, vestido de una corteza color gris ceniciento, muy poco agrietada y bastante espesa, llega como á 5 á 6" de diámetro; su madera, poco dura, de peso regular y sin embargo mas liviana que pesada, de testura fibrosa y grano bas- tante fino , es de color grisáceo morenusco, tanto mas pálido cuanto mas va acercándose ala albura, que es blanquecina, teñida de igual color, con unas vetas mas oscuritas, las cuales se reparan también en el corazón: esa madera no tiene aplicación ninguna que sepamos. Su peso específico es 0,813. Ese vejetal, que hemos hallado silvestre, especialmente en Guayana, se cultiva ordinariamente en los patios, que hermosea con su bonito follaje y sus primorosas flores amarillas qjae además exhalan un olor muy agradable, parecido al de la pri- miila terh de Europa. Cabo de hacha, guaban, jubaban, Cba. ; guaraguao, Prco. — Tri- cMlia spondioides. M. D. — G. 931. — Árbol grande y coposo que se eleva como á 20 varas, algo mas ó menos, de altura, de tronco recto -y bastante largo, que llega á 6 ó 6' 1[2 de diámetro ; suminis- 368 APÉNDICE 1°. tra una madera no muy dura ni muy pesada tampoco, de color os- curo, encarnado, rojizo pálido ó castaño oscuro por el corazón, bas- tante uniforme y á veces teñida de. amarillento y veteadita; según la edad del árbol y el terreno en que se haya criado, su color será mas ó menos oscuro : se debe además tomar en cuenta la testura de la parte labrada. Esa madera es bastante apreciada y buena para que se la utilice en la maestranza militar de San Juan de Puerto- Rico, donde se usa para carros fuertes, carretas y otras obras por ese estilo. En los .'talleres particulares se aprovecha para tablas, baños, canoas, bateas y fábricas del campo. La corteza seca es color de chocolate, con bastantes manchas blanquecinas ó cenicientas, mas ó menos corridas y estendidas, rugosa j con pocas grietas; su corte transversal hace manifiestas las capas corticales bastante den- sas y compactas, color de canela oscuro y de aspecto como algo re- sinoso; su cara interna, casi lisa, tiene casi igual color que las capas corticales, ó quizás algo mas clarito. Cabra, Prco. — Árbol silvestre abundante en la isla de Puerto- Rico, cuya altura llega como á 30' y el diámetro del tronco como á 10", de madera blanda, de color claro; se usa parabarazon de casas de campo. Calambreña ó calambreño, Prco. — Cocoloha nivea. M. D. — G. 387. — Árbol silvestre que se produce con abundancia por toda la isla de Puerto-Rico : su altura es de como 25' y el diámetro de su tronco llega á 8 ó 10"; su madera, que es de color blanco oscuro y de mediana dureza, no tiene oti^^ aplicación que para leña. Cafetillo, Prco. — Árbol silvestre del centro de la isla de Puerto- Rico; se eleva á 36' de altura y el diámetro de su tronco es de 18"; su madera, de color amarillento, se usa en tablas, cuartones y al- fajías. Café cimarrón, cafetillo, Prco. — Árbol de poca altura, como 36', y el diámetro de su tronco es de 18"; su madera, de peso regular y de buena dureza, es de color rojizo oscuro ó pajizo rojizo algo ve- teado ; la hay también de color amarillento; testura fibrosa, bas- tante compacta. La corteza seca es áspera, con grietas, blanquecina con manchas pardusco-verdosas, espesa como de una línea. Caimitillo, Prco., Cba. — Chrysophyllum raicrophylhim y chr. oliviforme. M. D. — G. 628. — Árbol silvestre que se eleva como á 40 ó 45' de altura y mas, cuyo tronco llega á 18 ó 20" de diámetro, suministra una madera de buen peso y de dureza mas que regular; testura algo fibrosa y bastante compacta, grano bastante fino, de color blanco sucio, otras veces algo achocolatado, mas ó menos pá- lido y rojizo á la vez, de corazón pardusco oscuro y teñido de rojizo, mientras la albura, mucho mas pálida, está teñida de rojo, con ve- tas poco pronunciadas. La corteza seca es bastante delgada, rugosa, con muchas grietas y hasta surquitos lonjitudinales, color achoco- latado pálido, con muchas manchas cenicientas; su cara interior es lustrosa, lisa, pardusca y veteadita; las capas verticales se despren- den con bastante facilidad. La madera se usa ordinariamente para latas de casas y manos de pilón: además se puede utilizar muy bien en obras de carpintería. DE LA.S MADERAS. 369 Caimito, Prco., Cba., Vzla., etc. — Cliryso]}liylUmi caimito. M.. D. — G. 628. — Árbol frutal silvestre que se produce con abundancia, se parece muchísimo á los anteriores, tanto por su altura como por su tamaño, cuya madera es mas oscura y de color morado, algo re- cia, no tiene aplicación, pero á nuestro parecer se la podria utilizar en las mismas circunstancias que la del caimitillo. Su peso específico es de 0,889. Canela ó canelo, Prco. — Árbol silvestre cuya altura llega á 35 ó 40', y el tamaño de su tronco á VI" de diámetro ; su madera es de color oscuro, algo dura, y se usa en las casas de campo. Su peso es- pecífico es de 0,515. Canelilla, Prco. — Árbol silvestre bastante común, que se eleva como á 25 ó 30' de altura y cuyo tronco llega á 12'' pulgadas de diámetro ; suministra una madera de color verdoso, bastante fuerte y que se emplea en techos de casas de campo. Cauto. — Bois canaris, Trd. — Hirtela silicea. — F. 131. — Árbol de los montes que se eleva á 10 ó 12 varas de altura y cuyo tronco llega á un diámetro de 6 á 8" y suministra una madera bastante li- viana, poco dura, de testura fibrosa no muy apretada, grano regu- lar, de color gris teñido de rojizo algo pardusco, ó quizás mejor ma- tizado de color de carne pálido y variegadito. No tiene aplicación ninguna que sepamos ; sus cenizas, mas ricas en sílice que ninguna otra clase, se utilizan en la fabricación de las ollas de barro, llama- das vulgarmente canari. Campeche, palo de campeche, Prco., Vzla. — Log wood, campe- chy log wood, Trd. — Hematoxylo7i campecJiia^utm. M. D. — G-. 1014. — Árbol silvestre que se eleva como á unas 10 á 15 varas, pero cuyo tronco corto, y largo solamente de unas 2 á 3 varas, es muy anfractuoso é irregular , no tarda en prolongarse en ramas gruesas bastante largas y derechas; su diámetro es de 18 á 24" cuan- do mas, el de las ramas llega á 8 y hasta 10"; su madera es muy dura y pesada, de testura bien compacta y de grano fino; su color es rojizo, purpúreo oscuro, con vetas mas oscuritas, bastantes veces teñido de anaranjado, especialmente por la parte que corresponde á la albura, la cual es blanquecina, matizada de anaranjado, lo que hace hermoso contraste con el color de la madera. Sin embargo, al tumbar el árbol, su'madera labrada es de un color blanco rojizo y no toma su hermoso color sino poco á poco y después de una larga esposicion al aire : el individuo cuya muestra tuvimos en mano contaba mas de 40 años de edad. Su peso específico es de 0,992. Cor- teza bastante delgada, espesa solamente de una línea y media, bien compacta, muy rugosa, de color gris mas ó menos claro y á veces ceniciento; su interior parece achocolatado. En Europa esa madera se usa especialmente para teñir, pero también puede utilizarse para tornear. Caña fistola, Prco. — Cathartocarpus fistula. M. D. — G. 1005. — Árbol bajito que se halla bastante común en todas las Antillas y en el continente americano y se eleva como á 20' algo mas ó me- nos de altura, teniendo su tronco un diámetro de 9 á 10"; suminis- TOMO n 24 370 APÉNDICE 1* tra una madera de color encarnado, de peso y dureza regulares, bien fuerte, pero sin aplicación ninguna. Caña fistola cimarrona, Prco. — CatJiartocarpus brasüiensis, — Casse caca, bois gris, Trd., Ant. fr. M. D. — G. 1005. — Pri- moroso árbol que hemos hallado con bastante frecuencia, alto como de 15 á 18 varas, bastante coposo j cuyo tronco, recto y largo como de unas 4 á 6 varas, llega á un diámetro de 12 á 15"; suminis- tra una madera muy bonita, muy fuerte y muy resistente, de peso y dureza regulares ; testura fibrosa y sin embargo bastante com- pacta, grano bastante fino. Su peso específico es de 0,816 ; su co- lor es gris algo agamuzado, con hermosas vetas y listas algo mas oscuritas cuando recien labrado, mientras que al aire se vuelve de color canela amarillento ; la albura, al contrario, es gris pálido te- ñido de color de carne, mas ó menos pronunciado, veteadito ó sal- moneado ; las muchas estrias y poros que se perciben por su super- ficie y le dan un primoroso aspecto, resultan de los muchos vasos abiertos al labrarla. Bien que no se haya utilizado esa madera hasta ahora, nos parece que no merece el olvido en que se ha quedado, y que se la podria aprovechar con ventaja para muchas obras de car- pintería y quizás de ebanistería. Capa blanco, Prco. — Varronia alia. M. D. — G. 607. — Árbol "bastante grande y bastante coposo que se eleva como á 10 ó 15 va- ras de alto, con el tronco no muy recto, pero bastante largo, y que llega á un diámetro de una vara, algo mas ó menos; de madera muy dura y muy fuerte, de color amarillo oscuro, rompe oblicuamente; es muy duradera y de mucha estimación, se emplea mucho en la maestranza militar de San Juan de Puerto-Rico para el cureñaje, cubo y pinas de ruedas, bancos de carpinteros, prensas, etc. En el real arsenal se hace mucho uso de ella ; en talleres civiles sirve para muebles de lujo y se emplea en la construcción de edificios j para las fábricas de campo. Capa prieto, Prco. — Cyp., Trd. — Cordia gerascanthiis. M. D. G. 607. — Árbol silvestre cuya altura llega como á 40', de tronco recto, y largo como de 7 á 9 varas y mas, cuyo diámetro es de 18"; se cria ordinariamente en lugares montañosos. Su madera es de peso regular, ni muy pesada ni muy liviana tampoco, muy fuerte y elástica á la vez, de color como de hojas muertas pálido, con vetas algo mas parduscas, otras veces es gris amarillento, pardusco y ve- teado ; testura fibrosa y grano bastante fino. Su peso específico es de 0,574. Es muy apreciada; se emplea en la maestranza de San Juan de Puerto-Rico' en cabrias, cureñas, avantrenes, carros fuertes de sitio, de manos, juego de armas, etc. En talleres particulares se ha- cen con ella puertas, persianas, barras de catres, atadores, branca- Íes y flechas de carruaje y de carretas, tapa-bocas, brazos de trapi- ches, etc., y muebles ordinarios. Capa sabanero, Prco. — Árbol silvestre, que se eleva como á unos 30' de altura y cuyo tronco llega á 12" de diámetro ; suministra una madera de buen peso, bien dura y fuerte, es de color oscuro y se emplea en casas de campo y estacadas. Caoba, Prco., Sto. Dgo., Cba., etc.; caoba ó caobo macho hem- DE LAS MADERAS. 3*71 bra. — Stvetenia majogani. M. D. — G. 943. — Este primoroso árbol, que se va destruyendo cada dia mas á causa de las necesida- des del comercio, se debería sembrar en los sitios donde ha de cre- cer, dejando entre los individuos 30 á 40' de distancia; le conviene una tierra lij era y algo pedregosa; crece bastante pronto y se en- cuentra en la altura mediana de las montañas, como también en las selvas bajas; es poco delicado y necesita poco calor: plantíos he- chos con él en escala mayor vendrían á ser una gran riqueza para los que se dedicasen á esa clase de cultivo. Es de altura mayor y su tronco bien recto y muy largo llega hasta dos varas y mas de diá- metro; suministra una madera bastante liviana y poco dura, y sin embargo bien fuerte; grano algo grueso ó fino, según la clase, color rojo oscuro y como pardusco, con ramazón mas ó menos amarillenta, otras veces con remolinos oscuros ó pálidos; esa madera, muy cono- cida de todos y muy apreciada en Europa para muebles de lujo, se aplica además en los paises donde se cria para obras de fábricas de casas; su peso específico es de 0,819. Caobilla. — Variedad de la caoba, de inferior calidad y solidez, de color mucho mas pálido; madera regular, pero que no es tan apreciada ni tan buena tampoco como la caoba lejítima; se usa espe- cialmente en tablas y tablones. Carapa, crapo. — Crapaud, Trd. — Carapa gtiyanensis. M. D. — G. 929. — Primoroso árbol muy coposo, que se eleva á 15 ó 20 varas de altura, con tronco recto, pero no muy largo, sin echar ramas, cuyo diámetro llega á 3' y hasta algo mas; suministra una madera apreciada, de peso regular, no muy dura, pero bastante fuerte, tie- ne el aspecto y el color de la caoba, pero sin sus hermosos remoli- nos ni sus vetas grandes ; no tiene tampoco el matiz amarillento par- ticular á esa madera, es también fácil para labrar ; su peso específico es de 0,689 y 0,661. La variedad de color mas claro sirve para mue- bles, se utiliza en tablas y tablones; se parte con facilidad, de ma- nera que con los cuños se saca de ella tablillas, tajamaníes y duelas apreciadas. Caracolillo, Cba.; caracolillo labrado, Prco. — Árbol silvestre cuya altura llega á 60' y el diámetro de su tronco como á 3'; su- ministra una madera trabada de color amarillento veteado , forman- do encuentros, nudos ó remolinos á manera de caracoles, de esa circunstancia ha sacado su nombre ; muy buena para fábricas y bastante empleada para estantes de casas, estacones, etc. ; pero su uso común es para muebles; hay mucha estraccíon de ella en Puerto- Rico para el estranjero. Caracolillo liso, Prco. — Nos parece solamente una variedad del anterior, al cual se asemeja enteramente, tanto por su aspecto, al- tura y tamaño, como por el color y los usos de su madera; también hay mucha estraccion de ella para el estranjero, Caracolillo, Cba. — Se llama también así á una variedad de cao- ba. (Véase esa palabra.) Carey, vaca-buey, careicillo, Cba., chaparro, Trd., Gna. — Feuilles rudes, Ant. fr. — Curatella americana. F. Dilleniáceas. — Árbol muy abundante en Trinidad y en Guyana, provincia de la 372 APÉNDICE 1° República de Venezuela. Se cria en los terrenos arenosos y pedre- gosos, que entonces se llaman chaparrales; se eleva como á 20' de altura^ algo mas ó menos, y el tamaño de su tronco, poco largo j no muy recto, es de 6 á 8", raras veces mas; suministra una madera bien pesada y de buena dureza, de color como castaño algo rojizo y jaspeado, con nudos y vetas mucho mas oscuros; el color de la al- bura, mucho mas pálido, contrasta con el del corazón; sin embargo es algunas veces tan oscuro. Hay en el corazón hermosos remolinos formados por los nudos; el aspecto yalir una leche abun- dante y muy pegajosa. La madera es de peso regular, no muy dura, de testura fibrosa, albura espesa como de lj2 pulgada ; es blanca. 378 , APÉNDICE 1° mientras el corazón es color aceitunado pálido, frecuentemente con hermosas vetas mas oscuras j á veces formando como dibujos. En el corte transversal se ven las zonas concéntricas bien pronunciadas; su peso específico es de 0,599, es muy fácil de labrar y sin embargo de buena resistencia y susceptible de un hermoso pulimento, por eso se la emplea con mucha ventaja en obras de ebanistería, para fusiles, y además para hormas de zapatos, etc. Copaiba, Cba.; palo de aceite, Prco.; copaivi, Trd. — Copaifera ofJicinaUs, M. D. — G. 392. — Árbol silvestre bastante grande y coposo que á primera vista se parece un poco al nogal de Europa y se eleva como á 40 ó 50' de altura y cuyo tronco bastante recto y largo tiene 12 á 18 pulgadas de diámetro y suministra una madera muy buena, muy bonita, bastante dura, de buen peso, de testura fi- brosa, pero bastante compacta y grano fino ; es de color general pardusco ó quizás como de hoja muerta, con remolinos negros que provienen de los nudos y la hacen muy hermosa y casi parecida á la del nogal de Europa ; de aspecto como moere y algo jaspeado á la vez; su raspadura huele á aceite de palo ó bálsamo de copaiba; sirve para obras de carpintería de fábricas, ruedas de carruajes y carretas, para tornear y obras de adorno del interior de las casas, puede además servir para muebles ; su peso específico es de 0,77*7. En la ciudad de Bolívar hemos visto despachar en las bodegas su segunda corteza seca y vuelta correas ó tiras largas con el nombre de curncai, y se usa diariamente para sujetar y atar las varas y varitas que se emplean en la construcción de las casas del campo y es muy duradera; parece una especie de cuero vejetal ; para em- plearla se remoja y entonces se vuelve muy flexible y muy fuerte, exhalan entonces el olor particular del aceite de palo. Copey, Cha.; cupey, Prco. — Clusia rosea. M. D. — G. 874. — Árbol silvestre que principia por ser parásito produciéndose en las grietas de otro árbol cualquiera, que las mas veces mata ahogándole, y sigue vejetando así hasta que sus raices bajan entrelazadas en el tronco y prenden en la tierra; otras raices que bajan también, pera solas y sin sostenerse por tronco ajeno, se vuelven ellas mismas en poco tiempo troncos muy rectos y muy fuertes después de haberse prendido en el suelo. Cuando se haya criado terrestre solamente su tronco no será tan alto pero sí mas grueso y el árbol mas coposo ; su diámetro es como de 18 á 24" y llega á una altura como de 30 á 40 pies; su madera es de color rojizo y solo sirve para leña; su peso específico es de 0,876. Cordobán, Cba. — Miconia pyramidalis . M. D. — G. 1090 Ms. — Árbol de unos 15 á 20' de alto y cuyo tronco llega como á 6 ú 8'' de diámetro y suministra una madera muy buena, muy fuerte y muy apreciada para cualquiera obra de carpintería con que puede cor- responder su poco diámetro : no la hemos visto. Cotorra, Prco. — Árbol silvestre que se produce con abundancia en toda la isla de Puerto-Rico ; su altura es de 30 á 35 pies, y el diá- metro de su tronco de 8 á 10 pulgadas ; suministra una madera de mediana dureza, de color amarillo canario y se parte verticalmente, DE LAS MADERAS. 379 se emplea en armazón de casas de campo, empalizadas j otras apli- caciones de esa especie. Cucubano, Prco. — Árbol silvestre que se produce con abundan- cia por toda la isla de Puerto-Rico, se eleva como á 35 ó 40' de al- tura y el diámetro del tronco es de T ; madera un poco sólida, de color blanco cenizo y se parte verticalmente; se emplea en la cons- trucción de casas de campo. Cucuyo, ojo de cucullo, jiguí, Cba. — Biimelia nigra. M. D. — G. 641. — Árbol silvestre de mediana altura y de poco diámetro, que suministra una madera muy sólida, fuerte, dura, de color entre amarillo y negrusco, muy apreciada para horcones. Hay otra varie- dad mas pequeña todavía, pero cuya madera mas fuerte y mas só- lida suele utilizarse para horcaduras. Cuaba blanca, Cba.; tea, Prco. — Amyris silvática, M. D. — G. 997. — Árbol silvestre cuya altura es de 25 á 30' y el diámetro de su tronco de 5 á 8" lo mas; suministra una madera aromática, fuer- te, sólida, de color blanquecino y rompe verticalmente; sirve en las fábricas del campo para estantes; además, como es muy resinosa, la usan en el campo como hachones, en astillas, con lo que se alum- bran en la pesca de las hicoteas y aun los pobres del campo se alum- bran con ella en sus chozas; también es buena para muebles. Cucurito, Gna. ; cocorito, Trd. — Maximiliana regia. M. D. — G. 92. — Primorosa palmera que hemos hallado con abundancia en Trinidad y en las misiones delCaroni, provincia de Guyana, la cual se eleva á 40 ó 50' de altura y el tronco llega á 12 ó 15" de diámetro ; suministra una madera color de chocolate lanto mas pronunciado cuanto mas inferiores y esteriores son las partes de que proviene, mientras que en el caso contrario es el resultado de muchísi- mas vetitas paralelas pero sin simetría ninguna , mas ó menos agrupadas entre sí, cuyo color es rojizo pardusco, irregularmente interrumpido por el fondo cuyo color es camuza pálido, lo que es de un aspecto muy hermoso. Su peso específico es de 1,063 y de 0,991. Esa madera labrada sirve esclusivamente para bastones primorosos; bien dura y muy fuerte , pero sin embargo , como se rompe con bas- tante facilidad, no es muy á propósito sino para embutidos en los muebles de lujo, especialmente para mesas, roperos, etc., además, en Trinidad, utilizan las tablas que con el hacha y la cuña sacan de esa palmera, del carat sabal, del groo groo acrocomia sderocarpa del manaque, .Euterpe olerácea y otras, para fábricas del campo. Curucai. — Encense tree, Trd. — Amyris trinitensis. M. D. — G. 997. — Árbol silvestre de la altura y tamaño de la cuaba blanca, que da una madera mas liviana que pesada, de poca dureza, de tes- tura fibrosa y sin embargo no muy floja, grano regular; de color gris rojizo teñido de achocolatado, como salmoneadito, con vetas li- neares, otras veces con listas mas rojizas y bastante grandes, mas ó menos disciplinadita, casi sin albura y apenas perceptible, porque es casi de igual color : no tiene ninguna aplicación que sepamos. Curbana, canela blanca, Cba. — ^ Canela alia. M. M. — G. 940. — Árbol silvestre y poco abundante en las Antillas, mientras que es muy común en ciertas partes de la Guyana, en las montañas del 380 APÉNDICE 1" Caroni j de Upata, donde lo hemos hallado durante nuestras pere- grinaciones por esas comarcas ; se eleva comoá 30 ó 40 pies y el diá- metro de su tronco es de como 12 á 18 pulgadas; suministra una madera bien pesada y de muy buena dureza, de color acanelado 6 pardusco claro bastante uniforme, y sin embargo, con algunas vetas muy poco pronunciadas; no tiene ninguna aplicación que sepamos. Cuero de zapo, Prco. — Árbol silvestre que se eleva á unos 40' de altura y cuyo tronco llega á un diámetro de un pié y medio ; su ma- dera es de color pajizo, no tiene aplicación y la usan en el campo para leña. Chicha.rron, Cba. ; Chicharrona intermedia, Eich. F. Combretá- ceas. — Árbol silvestre bastante grande y coposo, que suministra una madera muy apreciada por ser sólida y buena, de testura fi- brosa y bastante porosa á la vez, de albura color aceitunado oscuro salpicada de unos puntitos prietos, mientras el corazón es de un hermoso color prieto, mucho mas duro, y quizás se espresaria uno mejor diciendo que su color es de rapé veteado de pardo mas oscuro ó jaspeado y de aspecto muy bonito; es susceptible de pulimento y después de barnizada su color se pone mas subido ; también la hay amarilla; es muy á propósito para carruajes, carretas, ruedas de molino para descascarar café y otros usos. Chino. Véase naranjo. Chuspa. Véase cuspa ó cusparé. Cuspa, cusparé, quina de las misiones del Caroni, etc. —Bonplan- dia trifoliata. M. D. — G. 838. — Árbol silvestre que hemos ha- llado con abundancia en las montañas cercanas de Upata, cabecera del cantón de ese nombre, provincia de Gu^^ana, República de Ve- nezuela, es social y situado como á 6 ú 800 varas sobre el nivel del mar; se eleva como á 25 ó 30' de altura, su tronco recto llega como á 6 ú T' de diámetro lo mas; suministra una madera bien pesada, bien dura, bien compacta, muy fuerte, de grano muy fino, de un color amarillento algo mas pálido que la del boj de Europa, á la cual se parece mucho y que, á nuestro parecer, podria suplir muy bien para las obras de torneo y de carpintería correspondientes con su corto diámetro ; el color del corazón es mas subido. Los Indios de Cumaná y de Barcelona, provincias donde se halla con abundancia, lo emplean para mangos de harpones, para flechas ; se utiliza tam- bién para horcadura de casas ; se hacen con él bastones muy bonitos y muy fuertes ; es muy amargo. Cuajaní ó cojaní, Cba. — Véase almendrón. Cují. — Véase aroma. Cytero, Cba. — Pomme cythére, Trd. — Spondias cytherea.'^, D. — G. 276. — Árbol cultivado solamente por sus frutos bastante apreciados ; se eleva como á 30 ó 35' de altura y el diámetro de su tronco llega á 1' lj2 ó 2' ; se parece bastante al jobo ; de madera amarillenta con vetas ó undulaciones algo mas oscuras ; dureza re- gular, buen peso, testura bastante compacta y grano fino. Nos ha parecido susceptible de pulimento y sin embargo no tiene aplicación que sepamos. DE LAS MADERAS. 381 D Doncella. (Véase carne de doncella.) Dividivi, Gna. M. D. — G. 1018. — Árbol silvestre que hemos hallado con bastante abundancia en la Guajana , en las provincias de Cumaná y de Barcelona, República de Venezuela ; se eleva á 45 ó 50' de altura, porque sus ramas son muy gruesas y grandes: es por consiguiente muy coposo, de tronco recto, pero poco largo : de 3 ó 4 varas lo mas, pero llega á un diámetro de 24 á 30"; su madera es bien pesada, muy compacta, de grano muy fino ; es tan dura que las herramientas se rompen al labrarla; su albura, poco espesa, es blanca, mientras que el corazón es negro ; sirve para rollos de tra- piches; podría además, á nuestro parecer, utilizarse con mucha ven- taja para tornear y especialmente para ruedas de motón. Dagame,Cba. — Calycop1iyllic77i candidissimum . M. D. — G.723. — Árbol silvestre de mediana altura y tamaño que se eleva como á 8 ó 10 varas de altura lo mas, y cuyo tronco, largo de 3 á 4 varas, llega á un diámetro de 10'' y suministra una madera bastante pe- sada y dura, fibrosa y sin embargo bastante compacta; de color aga- muzado con vetas algo mas oscuritas; en el corte transversal el co- lor es mas subido y se ven las zonas concéntricas, pero no muy pronunciadas, mientras que en el corte vertical se reparan muchos poritos separados los unos de los otros por muchos radios medulares filiformes ; es susceptible de pulimento y después de barnizada se parece algo al boj de Europa, tanto por el color, como por el grano. Es muy fuerte y muy sólida, de suerte que se utiliza diariamente para las obras de carpintería del campo y se la prefieren para ejes, timones, arados, etc. El ganado come sus frutos. Daguilla, lagetto, Cba. ■ — Lagetta Untearia. M. D. — G. 389. — Árbol de 8 á 10 varas de altura, cuyo tronco llega como á 6 ú 8" de diámetro, su madera no tiene aplicación ninguna que sepamos, y solo sirve para leña; pero su interés lo saca de su corteza que se puede utilizar muy bien para cordelería y tejidos y cuyo liber pa- rece encaje. Dobla uña, Cba. — Madera bastante dura, pero no muy pesada, de testura fibrosa bastante compacta y grano fino, de un color gris teñido de amarillento pardusco, con vetas algo mas oscuras. Nos ha parecido susceptible de pulimento, y sin embargo no se ha utilizado hasta hoy dia que sepamos. E Ébano de Oriente ó real, Cba. — Accacia Ledhec, y propiyiqua. M. D. — G. 298. — Árbol silvestre que se eleva á 40 ó 45' de al- tura y cuyo tronco bastante derecho y largo llega al diámetro de 12 á 15" y suministra una madera preciosa para muebles finos é instru- 382 APÉNDICE 1** mentos; es incorruptible, ele dureza regular y buen peso, testura compacta y grano fino ; susceptible de hermoso pulimento ; su color es negro teñido de pardusco mas pálido j veteado, con la albura blanca. Emajagua. (Véase majagua.) Enemosco ó nuez moscada del país. — Monodora myristica. M. D. — G. 885. — Árbol silvestre, que se produce en toda la isla de Puerto-Rico, pero con bastante escasez; su altura es de 25 á 30' y el diámetro de su tronco es de 8 á 10" ; su madera es de color amarillento, bastante fuerte, pero no tiene aplicación ninguna. Enrubio, Prco. — Zanthoaylmn lanceolatum. M. D. — G. 229. — Árbol silvestre no muy común que se eleva á unos 25 ó 30' de altura; el diámetro de su tronco es de 10", su madera muy dura, colorado el corazón, con la albura blanca : no tiene aplicación que sepamos. Espino amarillo, Prco. — Zantlwxylon. M. D. — G. 229. — Ár- bol silvestre abundante en toda la isla de Puerto-Rico ; su altura es como de 50' y el diámetro de su troncó como de 2' ; suministra una madera de color amarillo claro y cuyo uso es solo para tablazón de casas ; quizás será la ayua de Cuba ? Espino blanco, Prco. — Zanthoxylon. M. D. — G. 229. — Árbol silvestre que se parece mucho al anterior, tanto por su altura como por su diámetro; su madera es de color mas claro, también sirve co- munmente para tablazón de casas; quizás será la ayua blanca de Cuba ? Espino rubial, Prco.; espino Cba. — Fagara pterota. M. D. — G. 835. — Árbol silvestre que se produce con abundancia casi por toda la isla de Puerto-Rico, cuya altura es de 40 ó 50' y el diámetro del tronco, de 1', su madera algo fuerte y sólida, de color amarillo ver- doso ó de rapé, con gateados preciosos amarillos ; sé emplea en ta- blazón de casas, puertas, etc. En la maestranza militar de San Juan de Puerto-Rico sirve para arcenes de efectos; en los talleres parti- culares sirve para hacer cubichetes, pisos, puertas, ventanas, etc. Espinillo ó juso, Prco. — Árbol silvestre que se halla con abun- dancia en las costas de la isla de Puerto-Rico; se eleva como á 35' de altura, y el diámetro del tronco es de un pié; su madera es color verdoso ú oscuro con vetas amarillentas y su uso común es para es tantes de casas» balaustres, etc. Espejuelo, Prco. — Árbol silvesfro poco abundante, cuya altura es de unos 30' y el diámetro del tronco de 8 á 12" ; su madera recia es de color amarillento y se usa para estantes de casas y estacadas. Espejuelo amarillo, Prco. — Árbol silvestre abundante por el N. O. de la isla de Puerto-Rico, cuya altura es de 40 á 50' y el diáme- tro del tronco de 1'; su madera es fuerte, pesada, de color amarillo con vetas negras cuando está fresca, pero á pocos dias de labrada su color se pone toda de un color casi negro ; se emplea en estantes de casas. Encina, Cba.; roble, Prco. — Catalpa longisilicua. M. D. — G. 526. — Árbol silvestre bastante abundante en las Antillas y en el continente americano ; se eleva como á 45 ó 50' de altura y su tron- DE LA.S MADERAS. ' 383 co llega al diámetro de 15 á 30", suministra una madera muy dura, muy fuerte j muy buena para obras de carpintería del campo, car- retas, etc. F Frijolillo amarillo y prieto, Cba. — Savonette jaune, Trd. — Lonchocaoyus latifolmsj sericeus. F. 130. — Árbol silvestre que se halla especialmente por la costa y se eleva á como 30 ó 40' de altura, con el diámetro del tronco de 15 á 24" ; dos clases de frijolillos hay, una que tiene el corazón prieto y la otra que lo tiene amarillo : esta última es mucho mas común que la primera. La madera del frijo- lillo prieto es de peso y dureza muy regulares ; su corazón es prieto con hermosas vetas ó undulaciones mas pálidas ó como achocolata- das, que le comunican un aspecto veteado ó jaspeado muy bonito; la albura es color de chocolate muy pálido ; testura fibroma y sin embargo bastante compacta, muy sólida y bastante apreciada; su peso específico es de 0,720. Corteza seca muy tosca y muy rugosa, color pardusco-rojizo , epidermis bastante espesa; capas corticales muy pocas y mas pálidas ó blanquecinas ; cara interior pardusca y con jaspeo escaso y blanquecino. Fustete, Cba.; mora, Prco. — Bois z'orange, Trd. — Madura tinctoria. M. D. — G. 220. — Ese árbol silvestre, bastante común pero que crece con asaz lentitud, se eleva como á 50' de altura, y el diámetro del tronco es de V lf2 ó 2' ; suministra una madera primo- rosísima por su bonito color amarillo anaranjado y jaspeado á la vez, pero que con el tiempo y la esposicion al aire se va poniendo poco á poco mas pálido, hasta volverse amarillento sucio, lo que se evita barnizándola cuando se emplea para muebles; su peso especí- fico es de 0,711. Es de mucha estimación para el arte de teñir, en que se la emplea mucho, de manera que constituye un ramo de es- portacion para el estranjero. En los países en donde se cria se la emplea para estantes de casas de campo, para pifias y radios de rue- das de carruajes y carretas y para cualquiera obra de carpintería que«necesita fuerza y resistencia. G Gía blanca ó brava, jía blanca ó brava, Cba. — Casearia alia y ramijlora. F. 87. — Árbol silvestre que se eleva á 15 ó 25' de altu- ra, con el diámetro del tronco de 8 á 10". Madera de buen peso y buena dureza, cuya testura es bastante compacta y el grano regu- larmente fino; su color es casi como el del boj de Europa, es decir amarillo pálido, de matiz casi uniforme algo veteado ; las zonas con- céntricas que se ven en su corte transversal son muy poco pronun- ciadas y casi de igual color ; es bastante apreciada ; su peso especí- 384 APÉNDICE 1° fico es de 0,162. Su corteza seca tiene como una línea escasa de espesor, es de color achocolatado con manchas cenicientas, áspera, con muchas grietas transversales y pocas verticales, bastante com- pacta, quebradiza y no fibrosa ; capas corticales color de canela pá- lido ; cara interior pardusco rojizo pálido. Gaita, Prco. — Árbol silvestre cuya altura es de 20 pies y el diá- metro del tronco de 18 pulgadas ; suministra una madera blanca que se emplea en estantes de casas y vigas. Garrocho, palo de garrocho, Prco. — Myrodia turlinata. M. D. — G. 920. — Árbol silvestre que se produce con abundancia por toda la isla de Puerto-Rico, cuya altura es de 25 á 30' y el diámetro del tronco de 6 á 8" ; su madera es bastante floja, liviana y de color ceniciento; no tiene aplicación. Gateado, Prco.; gatia, Trd. — Letter wood, leopard wood, Trd. — Brosymum gtdanensis. M. D. — G. 114. — Árbol silvestre cuya altura es como de unos 20 ó 30', y el diámetro del tronco de 10 á 12 pulgadas ó algo mas; el de Puerto-Rico tiene la madera de color encarnado con vetas negras; es bien compacta y bastante dura, mientras el de Trinidad la tiene de un color moreno amarillento ve- teado ó jaspeado de pardusco bastante oscuro, con muchos radios medulares; bien dura, compacta y muy pesada: nos ha parecido sus- ceptible de un buen pulimento, buena para obras de carpintería fina y de ebanistería ; su peso específico es de 1,352. Gasparil, gasparillo, Trd. — EsenlecUa. F. 111. — Árbol silves- tre cuva altura es de 20 á 25' y el tamaño del tronco 6 á 8" á lo mas; suministra una madera muy fuerte y elástica, que se parece mucho á la del boj, cuyas propiedades tiene, y que puede por consiguiente reemplazar para obras de torneo ; se usa también para pilares y es- tantería de casas cuando el tamaño del árbol lo permite ; sirve ade- más para bastones muy bonitos y muy fuertes ; su peso específico es de 1,106. Geo geo, Prco. — Árbol silvestre que se eleva como á 25 ó 30' de altura, con el diámetro del tronco de 1' ; da una madera floja, de color oscuro, que sirve solo para leña. Goao, Cba. — Rlius metopium. M. D. — G. 988. — Árbol silves- tre que se eleva de 25 á 40' de altura, con el diámetro del tronco de 15' á 24"; madera de peso regular, de dureza mediana, testura'muy apretada y grano fino; su color es de un hermoso rojo oscuro, con vetas aun mas oscuras, que se vuelve algo mas pálido con su esposi- cion prolongada al aire; hemos tenido en mano muestras de color mucho mas pálido; su albura es de color blanquecino teñido de roji- zo, y cuyo matiz es á veces bastante uniforme : nos ha parecido sus- ceptible de pulimento, y sin embargo no tiene aplicación que sepa- mos. Gongolí, Prco. — Árbol silvestre que se eleva como á 25 ó 30' de altura, con el diámetro del tronco de 10 á 12" ; suministra una ma- dera compacta y fuerte, de color encarnado ; rompe oblicuamente ; su uso común es para armazón de casas y estacadas. Granadino, Cba. — Brya edenus. F. 130. S.-F. I.— Árbol silves- tre que se eleva como á 20 ó 25' de altura y cuyo tronco, largo de DE LAS MADERAS. 385 12' á lo mas, llega al diámetro de 6 á 8" y suministra una madera bien apreciada en la isla de Cuba por ser dura y bien resistente ; se usa en la construcción de las casas ; se utiliza también para bastones, muebles de lujo y carpintería fina, porque es bonita. Sentimos no poder dar de ella ninguna descripción, por no haber tenido en mano ninguna muestra de ella. Gris gris, Trd. — Desmonclms, F. 14. — Hermosa palmera muy común en la isla de la Trinidad, cuyo tronco, largo de 15 á 25', llega al diámetro de 10 á 12" ó algo mas; suministra una madera casi tan pesada como la piedra, y por lo menos tanto como la del guayacan, durísima, de color prieto con vetitas lineares pardo oscuras ó quizás mejor, formado de vetas desiguales alternativamente negras y par- dusco-achocolatado claras; hay algunas mas finitas, de color blanco sucio. Sirve para tablas muy duraderas que se emplean para sobre suelos ó pisos muy hermosos, y á nuestro parecer se la podria utili- zar muy bien para la ebanistería fina; el tronco se emplea para es- tantes de casas y de establecimientos del campo. Guacamuya, Cba.; clavellina, Prco. — Voinúana imlclievrima. M. D. — G. 1018. — Bien que el tronco de ese arbusto solo llega á unas 3 ó 4" de diámetro ; citaremos su madera por ser muy bonita y quizás susceptible de utilizarse para la ebanistería fina; su color es anaranjado veteado ; es de poca dureza, y sin embargo de testura y grano bastante finos; su peso específico es de 0,389. No pasaremos adelante sin señalar otro árbol del mismo género, natural de Mada- gascar, pero perfectamente bien aclimatado en las Antillas como árbol de adorno : es la Poinciana regia ; Rchb. : f.arnhoyaut de los Franceses; crece con bastante prontitud, su altura llega á mas de 30' y el diámetro del tronco como á 8 ó 10"; de madera amarilla algo veteadita, bonita y fuerte ; no tiene todavía aplicación ninguna; su peso específico es de 0,828. Guacima ó guazima, Prco., Cba.; guacimo, Yzla. — Guazumci ul- mifolia. M. D. — G. 922. — Árbol silvestre muy común en todas las Antillas y también en el continente americano vecino, que se eleva como de 30 á 40' de altura y cuyo tronco, bastante recto, llega al diámetro de 15 á 18" ; el de la especie de hojas pequeñas ó de las sierras es algo mas alto y corpulento ; suministra una madera bas- tante liviana, y sin embargo bien resistente, de testura fibrosa y poco apretada, grano poco fino, de color gris blanquecino lijara- mente matizado de rosado ó de color de carne, con vetas desiguales cuyas centrales, juntándose las unas con las otras, producen un as- pecto bonito, con muchas líneas muy finitas y mas oscuritas ; esa madera no tiene corazón y en algunas muestras es gris rojizo, jas- peado casi uniformemente ; no tiene aplicación , pero nos parece propia para setos y otras obras interiores de casas, bajo techos, etc. Sirve para leña, y el carbón mu}' liviano que produce seria bueno para fabricar pólvora; su peso específico es de 0,552. Corteza ru- gosa color pardusco ceniciento, muy agrietada, espesa como de 2 á 3 líneas; cuando seca, sus capas corticales cortadas transversalmente son color de chocolate ; se separa con facilidad en hebras poco fuertes. TOMO II 25 386 APÉNDICE lo Guacima amarilla, caria, Cba. — Xilopia cuiensis. M. D. — G. 898. — Árbol silvestre de madera muy liviana, muy blanda, cuya testura es floja y fibrosa á la vez, de color blanquecino teñido de amarillento y de rojizo á la par, con vetas irregulares y lineares, á veces bastante pronunciadas, pardusco-prietas ó pardusco-rojizas ; no tiene aplicación que sepamos. Guaguací, Cba. — LíbUci apétala. F. 87. — Árbol silvestre que se eleva á 20 ó 30' de altura, con el diámetro del tronco de 8 á 15" ; suministra una madera muy sólida pero bastante quebradiza, de peso y dureza regulares, testura bastante densa y grano fino ; su co- lor es blanco amarillento, amarilloso muy pálido ó blanquecino ape- nas veteadito ; muy apreciada en la isla de Cuba, se utiliza diaria- mente para tirantería y ligazones. Corteza rugosa muy agrietada transversal y verticalmente á la vez ; espesa como de una línea, co- lor gris pardusco, quebradiza y como resinosa. Guajanilla amarilla, Prco. — Árbol silvestre que se produce con abundancia por el sur de la isla de Puerto-Rico, cuya altura es como de unos 40', y el diámetro de su tronco de 12 á 15"; su madera es fuerte, de color amarillo oscuro, y se parte verticalmente; su uso común es para estantes de casas. Guajanilla prieta, Prco. — No es sino una variedad del anterior, de que se diferencia solo por su color amarillo oscuro con vetas par- das. Guama, Prco., Cba. — Pois doux, Ant. fr. — Inga vera. M. D. — G. 294. — Árbol silvestre frutal muy común en las Antillas y en el continente americano vecino; liay muchas especies botánicas de ese género, siendo unas mas grandes que otras ; se eleva entre 40 y 60' de altura, de tronco bastante recto, con un diámetro que varía entre 1 á 2' ; suministra una madera con la albura de color ceni- ciento ó blanquecino sucio teñido de amarillento, mientras el cora- zón es de color gris teñido de pardusco rojizo muy claro, con mu- chas vetas capilares mas parduscas; de peso y dureza regulares; testura fibrosa y sin embargo bastante apretada, grano fino: parece bastante fuerte y resistente , sin embargo solo se emplea para car- bón y leña ; su peso específico es de 0,505. Guama de costa, majagua, Cba. — LoncliocoA'pus sericeus. F. 130. S.-F. I. — Árbol silvestre que se eleva á 20 ó 30' de altura lo mas, con el diámetro del tronco de 12 á 15". Madera primorosa, de buen peso, dureza regular y grano fino, de color canela claro con vetas lineares ó listas mas oscuritas, con muchos surquitos capilares llenos de una sustancia como gomosa, lo que le da un aspecto particular; con el lente se ve en el corte vertical que los surquitos señalados no son sino vasos abiertos al labrarla; la sección transversal es de igual color algo mas subido, con muchísimos poros llenos de una sustancia gomosa que la hace como barnizada, y muchas zonas con- céntricas cuyas mas centrales son de color mas subido; muchos ra- dios medulares muy finitos y mas pálidos, lo que le da un aspecto muy bonito; es muy fuerte y resistente, lo que la hace apreciar bastante para muchas obras de carpintería, para fábricas del campo y otras cosas ; su peso específico es de 0,1-20. DE LAS MADERAS. 387 Guanábano, Prco., Cba., etc. — Anona mtiric ata. M. D. — G. 900. — Árbol frutal silvestre no muy abundante y del cual hay al- gunas variedades; su altura es como de 35 á 40', y el diámetro de su tronco, recto y no muy largo, llega a V l\2 lo mas; da una ma- dera blanda, de color claro, la cual se rompe horizontalmente, no tiene aplicación ninguna y cuyo peso específico es de 0,397. Guara, Cba. — Cupa?iia glabra y triquetra, C. castanmfolia, Plm.,, ó C. tomentosa, Sw. — Castaño de las Antillas francesas. M. D. — G. 852. — Arboles silvestres, como de 35 á 40' de altura, cuyo tron- co recto y bastante largo llega á un diámetro de 10 á 15" ó algo mas* suministran una madera dura y fuerte, bastante apreciada en Cuba para obras de carpintería y carretería; sirve además diariamente para arcos de toneles, porque es muy resistente y muy flexible á la vez. Guaraguao, Prco. — Bullet wood, Trd. — Bois á bailes, Ant. fr. — Gaurea tricliiloides. — Muse ó alligator wood, Jca. — Trichüia moscata. M. D. — G. 931. — Árbol silvestre y abundante que se eleva como á 70' de altura, cuyo tronco recto y bastante largo llega al diámetro de 6á 6' \xl\ suministra una madera bastante dura, bien pesada, de testura bien densa y apretada, cuyo color es encarnado oscuro, se parte oblicuamente ; es muy apreciada para construcción de carros fuertes, de carretas, fábricas del campo y muellísimos trabajos de carpintería. Guarema, Prco. — Árbol silvestre cuya altura es de 30' y de 2' el diámetro del tronco; suministra una madera fuerte, compacta y de color oscuro, la cual se usa comunmente para armaduras de casas. Guasa, Prco. — Árbol silvestre que se eleva como á unos 35' de altura, con el diámetro del tronco de V ; suministra una madera algo floja, pero resistente, de color blanco, y se parte verticalmente; su uso común es para'tablazon de casas de campo. Gu.asávara, Prco. — Árbol silvestre bastante abundante, cuya al- tura es de 60' y el diámetro del tronco de 1, 1" 1^2; suministra una madera fuerte y compacta de color encarnado, y se parte oblicua- mente, su uso común es para estacadas y leña. Guasimilla, Prco. — Árbol silvestre que será sin duda una varie- dad de la guacima; su altura es de 35' y su tronco tiene 12" de diá- metro; su madera" es blanca, floja, y se parte verticalmente; su uso común es para armazón de casas de campo. Guatacare, guatequere y guatequero, Trd. — Leeytis idatimon. — F. Lecitídeas. — Árbol silvestre bastante grande, que se eleva como á 40 ó 45', cuyo tronco bastante largo y recto tiene como 12 á 18" de diámetro; se cria en los terrenos arcillosos y húmedos; su- ministra una madera bastante apreciada, bien dura, de buen peso, de testura compacta bastante entremezclada 3^ fibrosa, muy flexible; corazón de un color pardusco, como de hoja muerta, con listas casi achocolatadas que lo separan de la albura, mucho mas pálida, pero también teñida de pardusco; muy apreciada para marcos de puertas y ventanas, así como para muchas obras de carpintería, para las fá- bricas de casas y otros usos en que la fuerza ha de hallarse unida á la elasticidad, como por ejemplo, flechas y brancales de carretas v 388 APÉNDICE 1« carruajes; es susceptible de pudrirse al nivel del suelo, especial- mente empleada en lugares húmedos; su peso específico es de 0,899. Guatamare , cereypo, Trd., Vzla. — Myrospermíim frutescens. M. D. — G. 1008. — Árbol silvestre que hemos hallado muj abun- dante en las montañas del Caroni, cantón de Upata, provincia de Guayana, república de Venezuela: lo hemos encontrado también, pero con escasez, en la isla de Trinidad y en Puerto-Rico, pero sem- brado, V sin embarg-o tan hermoso y tan erande como en la Guya- na; se eleva como á 50 ó 60 de altura; es muy coposo, de tronco recto bastante largo, mas de 25', que llega al diámetro de V 1[2 j á veces mas, suministra una madera fuertísima, muv dura bastante, pesada, de testura compacta y grano fino; el corazón es b.omo de co- lor castaño veteado de pardo ; es muy apreciada para todas las obras de carpintería que necesitan ala vez mucha fuerza y duración ; tam- bién podria aprovecharse en obras de ebanistería y de torneo; su peso específico es de 0,980. Guatapaná, Prco. — Árbol silvestre que se eleva á unos 24 ó 30' de altura, con el tronco de 12" de diámetro; da una madera sólida y resistente, de color oscuro, la cual se emplea para estantes y em- barcaciones. Guayabo, Prco., Vzla. — Psidium pomiferitm . M. D. — G, 1112. — Árbol frutal silvestre muy abundante en todas las Antillas y en el continente americano correspondiente, que se eleva á una altura de 15 á 20' y el diámetro de su tronco no es mas que de 6"; suministra una madera de testura fina y compacta, bien pesada y grano fino; su color es gris pardusco y rojizo á la vez, con vetas paralelas y undulosas mas pálidas, que la hacen como jaspeada y muy bonita á la vista, con nudos pardos; es muy apreciada para las obras de carpintería que corresponden con su poco tamaño y que ne- cesitan á la vez fuerza y elasticidad; sirve pues para los instrumen- tos de agricultura, y se utiliza también en las fábricas del campo; su peso específico es de 0,696. Guayabito. — Bois caraibe, Trd. — Campomanesia aromática. M. D. — G. 1121. — Árbol silvestre y frutal, puesto que da la guayabita de arrayan, que se eleva á 25 ó 30' de altura, se cria en las montañas y su tronco llega á 6 ú 8" de diámetro ; suministra una madera m\ij dura y muy fuerte, de grano muy fino y testura compacta; su color es gi-is pardusco, casi café con leche, de aspecto muy bonito á la vista, aunque bastante oscuro á causa de sus pri- morosas vetas mas ó menos pálidas y formando dibujos muy varia- dos; no tiene aplicación que sepamos, pero á nuestro parecer se po- dria utilizar en las mismas circunstancias que la anterior; su peso específico es de 0,847 á 0,914. Guayabota roja, Prco. — Árbol silvestre bastante abundante; su altura llega á 36' y el diámetro del tronco es de 12"; su madera es de color rojo, algo blanda y de poca duración; se rompe oblicua- mente; su uso común es para armazón de casas de campo. Hay una variedad que se llama solo guayabota, cuyo color es mas claro. Guayabacon. Prco. — Árbol de las costas, cuya altura es de unos 30' y el diámetro del tronco de 18" ; su madera compacta y fuerte DE LAS MADERAS. 389 se rompe con dificultad y es de color rosado, se emplea en soleras y vigas de casas de campo. Guajacan, Prco., Cba., Vzla. — Guayacum ofjicinalis. M. D. — G. 862. — Árbol silvestre que se halla por las costas y se eleva como á 45 ó 50' de altura, y el diámetro del tronco llega á 12 ó 15" á lo mas; suministra una madera muy dura, muy apretada, de testura muy compacta y trabada, grano fino; su albura, casi tan dura, es color de boj, es decir, amarillento claro, mientras el corazón es de color pardusco oscuro matizado de verdoso, con vetas mas oscuras; es muy apreciada y forma un ramo de comercio para la esporta- cion; se labra bien con la sierra, y sin embargo, á pesar de su tes- tura fibrosa y muy trabada á la vez, se puede también hender con el hacha y especialmente cuando está el árbol recien tumbado, por- que entonces su madera es mucho mas blanda y se labra con mucha mas facilidad: se endurece pues mucho con su esposicion al aire, y entonces es difícil labrarla. Se usa mucho para maquinaria, ebanis- tería y obras de tornear , en fin, en todas las obras que necesitan á la vez dureza y resistencia, como dientes de trapiche, ruedas de pa- lanques, mortarios, ejes de carretas, etc.; es susceptible de hermoso pulimento; su peso específico es de 1,080, cuando verde seco 1,354 á 1,360. Guayacancillo, Prco. — Variedad del anterior ó quizás otra es- pecie. — Guayacum verticale. Guayo, Cba. — Ehretia hourreria. M. D. — G. 608. — Árbol silvestre bastante grande, que se eleva á 30 ó 40' y cuyo tronco al- canza el diámetro de 12 á 18"; madera de peso regular y buena du- reza, testura fibrosa no muy compacta y grano bastante fino, de color canela ó aleonado pálido, jaspeado y veteado á la par, algunas de sus vetas mayores ó listas son parduscas; se parece mucho al ébano colorado de Europa. Güira criolla, güira cimarrona, Prco. (Véase totumo.) Güitaran, Prco. — Árbol bajito y silvestre que crece por las cos- tas y se eleva como á 18 ó 20' de altura, y cuyo diámetro del tronco llega á unas 10 ó 12" ; su madera es de color rosado y con facilidad se rompe verticalmente; no tiene aplicación. H Haya, Prco. — Árbol silvestre bastante abundante, que se eleva á unos 30 ó 35' de altura y cuyo tronco llega al diámetro de 8 á 10"; su madera es de color blanco oscuro, flexible y se parte vertical- mente; su uso común es para remos de botes y varazón de casas de campo. Hatillo, Cba. — Madera de buen peso y de dureza regular, testura bastante apretada y grano bastante fino ; de color amarillento pá- lido y muy parecida á la del boj de Europa, aunque algo mas pálida y con algunas vetas ó listas desiguales teñidas de pardusco mas ó menos oscuro. 390 APÉNDICE 1» Hicaquillo. — Icaque grand bois, Trd. — Licania incana, Aubl. F. 131. — Árbol silvestre que se eleva á 40 ó 50' de altura, cuyo tronco bastante largo y derecho llega al diámetro de 8 á 10" á lo mas; suministra una madera bien dura, bien pesada, de testura fi- brosa, y sin embargo bastante compacta, grano fino; su color es de carne, no muy rojo, ó quizás mejor, color de flor de melocotón, con. vetitas ó remolinos muy poco pronunciados, que le dan un aspecto jaspeado muy bonito ; no tiene todavía aplicación, pero sin duda se utilizará algún dia, porque es bastante fuerte y hermosa; su peso específico es de 1, 050. Higuerillo, Prco. — Árbol silvestre que se eleva á 30' de alto y cuyo tronco llega al diámetro de 14 ó 16"; da una madera de regu- lar resistencia, de color ceniciento y que se rompe verticalmente ; su uso común es para estantes de casas, viguetas, cuartones, ta- blas,, etc. Higueron„higuerote, Vzla. — Ficus glahrata y demás especies. M.' D. — G. 111. — Arboles silvestres, grandes, corpulentos y muy coposos, cuyo tronco recto y bastante largo llega á veces al diáme- tro de 6 á 8', de madera bastante fuerte , no muy dura, de testura fibrosa bastante compacta, y sin embargo no muy pesada ; de color blanco amarillento; no tiene aplicación, pero á nuestro parecer se podría aprovechar para bateas y otras cosas por ese estilo y quizás en tablones para el interior de casas; su peso específico es de 0,450. Higuera blanca 6 criolla. (Véase totumo.) Hoja menuda, Prco. ; eugenia. M. D. — G. 1125. — Árbol sil- vestre q^ue abunda por las costas; su altura llega á unos 12', y el diámetro del tronco á 10"; suministra una madera fibrosa muy fie- xible y bien resistente, cuyo color es ceniciento; su uso común es para, hacer estacadas y carbón. Hortegon labrado, Prco. — Árbol silvestre que no se halla muy abundante y solo en el N. O. de la isla de Puerto-Rico; se eleva á unos 60' de altura, y el diámetro del tronco, bastante largo y dere- cho, llega solo á 2'; suministra una madera muy recia, de muchísi- ma duración, de color de carne, y se rompe verticalmente con difi- cultad; su uso común es para estantes de casas. Hortegon prieto. — No es sino una variedad del anterior, porque lo único que le diferencia es el color pardo de su madera; tiene tam- bién iguales usos. ^ Hucar blanco, Prco. — Bucida luceras. 'M.B. — G. 389 bis. — Árbol silvestre abundante por toda la isla de Puerto-Rico y demás Anti- llas, muy alto j muy corpulento ; en efecto se eleva á 80' de altura y su tronco recto llega al diámetro de 4 á 5' ; suministra una made- ra de color blanco amarillento, muy fuerte y fiexible, cuyo uso co- mún es para estantes de casas, mazas le trapiches, mazas de marti- netes; se emplea para cabos y piñaó de ruedas á falta de copa blanco; en la marina sirve para curbas de embarcaciones. Hucar prieto, Prco. — Es una variedad del anterior, del cual no difiere sino por el color ceniciento oscuro de su madera. Hueso, Cba. — Drypetes glauca. F. 106. — Árbol silvestre de larguísima vida que se halla bastante abundante en Cuba, Puerto- DE LAS MADERAS. 391 Rico, Mont-Serrato, Dominica, etc.; suministra una madera ente- ramente blanca que no tiene aplicación ninguna. Jaboncillo, Cba. ; paraparo, Vzla. — Savonnete jaune, Trd. — Sapinclus saponaria. M. D. — G. 853. — Árbol silvestre común en las Antillas y en el continente americano vecino; se eleva á una al- tura de 60' j su tronco bastante largo y recto llega al diámetro de 15 á 18", suministra una madera que es una de las mejores de esos paises, por ser fuerte j flexible á la par que resistente y no muy pesada : se debería utilizarla para fábricas de casas y muchísimas obras de carpintería. Además, sus propiedades la hacen muy á pro- pósito para pinas y radios de ruedas, etc. Jacana, Prco. — Árbol silvestre cuya altura es de unos 40', y el diámetro del tronco tiene 2' ; suministra una madera de color claro, flexible y bastante fuerte; sin embargo no tiene aplicación y se em- plea solo para leña. Jacaranda ccerulea. M. D. — G. 530. — Árbol silvestre que he- mos hallado en Trinidad y la Guyana, pero que se podría propagar con facilidad en las demás Antillas como árbol de adorno y también por su buena y hermosa madera; se eleva como á 40 ó 50' de altura, y su tronco, derecho y bastante largo, llega al diámetro de 10 ó 12'^ suministra una madera muy hermosa, cuyo color es gris amarillento pálido, jaspeado y como moere de igual color, pero algo mas oscu- rito; parece bien fuerte, de buena resistencia, dureza regular, buen peso, testura flbrosa, y sin embargo de grano flno, y por esa razón nos ha parecido susceptible de- pulimento; también nos ha parecido no tener albura ninguna. A nuestro entender se la podría aprove- char para carpintería fina y para muebles de lujo; reemplazaría con ventaja el fresno de Europa. Su corteza es mu}^ delgada, rugosa y de color pardusco blanquecino sucio, cuya epidermis se desprende con facilidad, dejando en pos de sí una mancha mucho mas pálida, blancuzca ó amarillenta; su parte interior es morena y achocolata- da ; su peso específico es de 0,652. Jagua, Prco., Cba.; caruto, Trd., Yzla. — Genipa americana, M. D. — G. 728. — Árbol silvestre abundante en todas las Antillas y en el continente americano vecino; es de la altura de unos 50', y el diámetro del tronco, bastante largo y bien derecho, tiene unos 15 á 20" ; suministra una madera no muy dura y bastante liviana, pero de mucha fuerza y resistencia, bien flexílde y de testura fibrosa; su color bastante uniforme, blanquecino teñido de pardusco rojizo pá- lido; se parece mucho al fresno de Europa, cuyas propiedades posee, y por tal razón es muy á propósito para cajas, lanzas y brancales de carruajes, y muchas obras de carpintería que necesitan á la vez fuerza y elasticidad ; hacen con ella cedazos, hormas de zapatos, etc. En la maestranza militar de San Juan de Puerto-Rico la emplean 392 APÉNDICE 1* para cajas de fusil y aros de cajas de guerra, etc. ; su peso específico es de 0,873. Jaguer, mata palo, Prco. — Fictis dendricida , F. radula, etc. M. D. — G. 111. — Árbol silvestre bastante abundante , cuya al- tura es de 40 á 50', y el diámetro del tronco, bastante largo y recto, llega á 6'; suministra una madera bastante liviana, poco dura, de testura fibrosa y algo floja, grano poco fino de un color amarillento mas ó menos pálido, otras veces es canela pálido con muchas vetas lineares y paralelas que le dan un aspecto muy bonito ; corazón y albura de igual color; á veces las vetas son mas pálidas ó mas oscu- ritas, formando entre sí especies de arabescos ; su uso común es para cayucos ó curiaras, baños, bateas para lavar, etc.; su peso específico es de 0.450. Jaimiquí, almiquí, Cba. — Achras. M. D. — G. 635.— Árbol de la isla de Cuba que suministra una madera muy fuerte , bien pesada y muy dura, testura bien compacta y grano fino, de color rojizo par- dusco con vetas algo mas oscuritas hacia el corazón, lo que la hace muy bonita y agradable á la vista; muy apreciada para las obras de carpintería que requieren á la vez fuerza y dureza. Jia brava, amarilla ó blanca, Cba. (Véase Gia.) Jarabacana, jarabaguana y jarabaina, Cba. — Madera de muy buen peso y durísima, de testura fibrosa y no muy apretada, de co- lor amarillento pálido con vetas mas ó menos pronunciadas, según la disposición del corte de la madera, cuyo color es azafranado pá- lido, ó quizás mejor anaranjadito, con la albura mucho mas pálida, lo que le da un aspecto particular. La muestra que hemos tenido en mano estaba ya un poco carcomida por los gusanillos; se utiliza para horcones. Javillo, Prco., Cba. — Sand-box, Trd. — Hura crepitans. M. D. — G. 126. — Árbol silvestre bastante común en las Antillas y en el continente americano; se eleva á unos 50' de altura, es muy ra- moso y primoroso, y por tal razón muy á propósito para arboledas, pues da una sombra muy agradable ; su tronco, bastante largo y recto, llega al diámetro de 24 á 30" y á veces mas ; suministra una madera bastante liviana y blanda, de testura fibrosa, bien resistente y de mucha duración en el agua; su color es blanco, apenas teñido de majon, con vetas parduscas que corresponden con el corazón; hay una variedad cuyo color es pardusco y es mas apreciada, porque las canoas que con ella se hacen son mucho mas fuertes y mas durade- ras que las que se hacen con la otra; su peso específico es de 0,465. Sirve también para tablas para forrar las casas y otras obras inte- riores. Al labrarla se debe evitar que su aserrín caiga en los ojos y se introduzca en las narices, porque puede determinar irritaciones fuertes que podrían degenerar en inflamaciones de alguna conside- ración; basta para eso cubrirse la cara con una gasa. Jigüera, Cba. (Véase güira cimarrona.) Jiquí, jequí, Cba. — Bnmelia nigra. M. D. — G. 641. — Árbol silvestre común en la isla de Cuba, que se eleva á 35 ó 40' de altura y el tronco llega al diámetro de 12 á 15" ; su madera es muy fuerte, durísima y de mucha duración, hecho tan conocido en c¿a isla que DE LAS MADERAS. ' 393 ha dado oríjen á una espresion vulgar muy usada, especialmente entre los hacendados y la jente del campo; en efecto, cuando uno quiere señalar una cosa muy fuerte dice : «Es un jiquí, é es como jiquí.» Esa madera, de grano fino y muy compacta, es color de rapé ó amarillento oscuro. Puesta en el suelo se la tiene por imputrefac- tible y dicen que se petrifica; su uso común es para horcones; cuesta mucho trabajo para labrarla. Jocuma, Cba. — Bícmelia pálida, Swtz. M. D. — G. 641. (Véase ácana, ausubo, etc.; Jobo, Prco., Cba., Yzla. — Hog plum, Trd. — Moubin, Ant. fr. — J^spondias hitea. M. D. — G. 2*76. — Árbol frutal silvestre muy abundante en las Antillas y en el continente americano, cuya altura es como de unos 40', con el tronco bastante largo y recto, de un diá- metro de 12 á 18"; suministra una madera liviana, poco dura, pero bastante fuerte y elástica á la vez, de color amarillento pardusco, punteadito y como moere, muy agradable á la vista ; no tiene apli- cación ; sirve solamente para leña; su peso específico es de 0,508. Jucaro martelero, Cba. (Véase hucar.) Jucaro prieto ó bravo, Cba. — Bucida capitata. (Véase hucar.) Juya. — Árbol silvestre abundante por toda la isla de Puerto- Rico, cuya altura es de 40' y el diámetro del tronco de 12"; sumi- nistra una madera bastante fuerte, de color amarillento, cuyo uso común es para armazón de casas y para remos de embarcaciones menores. Lacre. — Bois sang, Trd. — Vismia giiyaneiisis. — F. Hipericí- neas. — Árbol silvestre que se eleva como á 25. ó 30' de altura, cuyo tronco poco largo llega al diámetro de 5 á 1" \ suministra una ma- dera bastante liviana, de una dureza regular, bien resistente, grano fino y testura fibrosa, muy bonita y de un hermoso color, como flor de alberchigo ó melocotón pálido, ó quizás un color que vendría á ser como el resultado de la mezcla de los dos colores gamuza y carne pálido, veteadita de igual color algo mas subido y á la vez moere; no tiene albura ninguna; no se emplea todavía, pero á nuestro pa- recer podria servir para muebles de lujo; su peso específico es de 0,664. Corteza agrietada y como formada de capas toscas que pare- cen sobrepuestas las unas á las otras, poco espesa^ de líneaó línea y media escasa, color rapé; sale de ella una sustancia resinosa parti- cular color de lacre y que á nuestro parecer se podria aprovechar para barniz. Laurel blanco y prieto, Prco. — Laurier cyp, Trd. — Árbol sil- vestre que se eleva á mas de 60 ó 70' de altura, y cuyo tronco, recto y largo, llega al diámetro de 6 á 8"; suministra una madera muy fuerte v muy resistente, bastante liviana, testura fibrosa y sin em- bargo no muy floja, grano bastante fino, poco dura, exhala un olor aromático bastante agradable, de color amarillento grisáceo ó acá- 394 APÉNDICE 1° nelado muy claro, casi de hoja muerta, con hermosos nudos pardus- cos, de los cuales salen remolinos ó vetas parduscas mas ó menos pronunciadas, que al juntarse forman especies de dibujos de aspectO' muv bonito, sedoso y lustroso á causa de las muchas vetitas filiformes que provienen de los vasos abiertos al labrarla; su peso específico es de 0,658. Es incorruptible, y por esa razón la em- plean para piraguas y embarcaciones mayores con que se navega en el rio Kegro y en el Orinoco ; es muy buena también para carpinte- ría de casas y otras, puertas, ventanas, etc. Leche prieta, Prco. — Árbol silvestre del interior de la isla de Puerto-Rico, cu va altura es de unos 20' v el diámetro del tronco de unas 21" ; suministra una madera compacta, de color rosado, la cual se rompe con dificultad; su uso común es para estantes de casas. Lechecillo, Prco. — Árbol frutal silvestre que se eleva como á unos 40' de altura y el diámetro de su tronco llega á 12"; su madera es rosada, dura y rompe verticalmente; su uso común es pai^a es- tantes de casas;, sirve también para carbón inmejorable para fra- guas. Limoncillo, Prco. — Calyptranthes paniculata. M. D. — Gr. 1119. — Árbol silvestre cuyas hojas estrujadas huelen á limón; se eleva como á 50 ó 60' de altura y el diámetro del tronco lleera á 18": su madera es muy dura, flexible y de color morado, rompe con dificul- tad verticalmente; su uso común es para estantes de casas, estaco- nes de puertas, etc. ; su peso específico es de 1,112. Libisa ó lebisa, laurel leviza ó laurel blanco, Cba. — Oreodaphne aUa. M. D. — G. 225. — Árbol silvestre bastante grande que su- ministra una madera' muy fuerte que se emplea en la isla de Cuba para ejes de carretas. Limón agrio, Prco., Cba.; limeta, Cba.; naranjo chino, Prco. — Citronnier, limette, oranger, Ánt. fr. — Limón tree, lime tree, orange tree. Ánt. ingl. — Citrus limoniumr C. limeta, C. auran- tium. M. D. — G. 97^. Árboles frutales silvestres que se crian con abundancia en las Antillas y en el continente americano; se elevan á 20 ó 25' de altura y el diámetro del tronco llega á 8 ó 10" ; sumi- nistran una madera muy fuerte, flexible, bien compacta, de buena dureza y resistencia, pero que es mas objeto de curiosidad que da utilidad; sin embargo, se utiliza en ebanistería para filetes y embu- tidos de muebles de lujo. La de limón es de peso muy regular, de buena dureza, de testura fina y bastante compacta, de color amari- llento pálido, veteada ó jaspeadita casi uniformemente; su peso es- pecífico es de 0,833. La del naranjo común ó chino es tan fuerte, tan dura y pesada como la anterior, con albura blanquecina amari- llenta, mientras el corazón es de color pardusco muy pálido teñido de amarillento pálido; su peso específico es de 0,815. En la maes- tranza militar de San Juan de Puerto-Rico sirve para mangos de herramientas. Lirio blanco, -lirio silvestre, Cba. ; tabaiba, Prco. — Plnmiera alia y P. nivea. M. D. — G. 653. — Árbol silvestre que se halla por las costas, se eleva como á 30 ó 35' de altura, y el tronco, bas- tante recto, llega al diámetro de 6 á 8", vestido de una corteza color DE LAS MADERAS. 395 gris ceniciento ó blanco sucio, poco rugosa, espesa como de 2'" y muy lechosa cuando verde, de madera bastante apreciada para cier- tas obras de carpintería que neccbitan á la vez flexibilidad y resis- tencia; es de un color blanco amarillento ó gris amarillento pálido, con undulaciones desiguales, algunas claritas, mientras otras son un poco mas oscuritas, y hasta pardusquitas, cuando salen de los nudos, lo que le da un jaspeado bastante bonito: su testura es fibrosa y com- pacta, y el grano fino: tiene el defecto de que el canal medular per- siste durante larguísimo tiempo y raras veces desaparece del todo. Lirio colorado, Cba. ; alelia, Prco. — Plumiera bicolor y rubra. M. D. — G. (553. — Ese árbol de adorno es mas pequeño que el an- terior, puesto que solo se eleva á unos 20' j que el tronco no llega mas que á 5 ó^l" de diámetro ; su madera se parece enteramente á la del lirio blanco que acabamos de describir; no tiene aplicación ninguna, pero se podria utilizar en iguales circunstancias; su peso específico es de .0,853. Lombricero, Trd. (Véase Haba.) Lombricero del monte, Trd. — Angelin grand bois, Trd. — Di^ jplotropis bracliipetala, Trd. F. 130, S.-F. I. — Árbol silvestre que se eleva á 45 ó 50' de altura y cuyo tronco llega al diámetro de 15 á 18"; suministra una madera muy fuerte, bien duradera, de buena dureza y que se emplea con ventaja para las fábricas del campo, es muy bonita y casi de color de hoja muerta pálido, con muchas vetas desiguales mas ó menos paralelas, de color pardusco rojizo oscuro ó aleonado; albura blanquecino-amarillenta. LL Liaba, Cba. ; lombricero, Trd. ; pilón, Gna. ; moca, Prco. — An- gelin, Trd. — Partredy wood y bastard cabbage wood., Jca. — Andira racemosa. M. D. — G. 1082. — Árbol silvestre que se halla bastante abundante en todas las Antillas y en el continente ameri- cano; se eleva á 45 ó 50' de altura y su diámetro de 12 á 18"; su- mini-stra una madera bastante dura y cuyo color varia mucho, de manera que la hemos visto tan pronto de color rojizo ó encarnado, como pardusco y hasta prieto, otras veces amarillento: por esa ra- zón la llaman en Puerto-Rico una moca colorada y otra moca ama- rilla, aunque producidas por el mismo árbol. Los varios colores mencionados, juntando sus tintes de un modo mas ó menos regular y hasta caprichoso forman vetas capilares diversamente matizadas, lo que le da un aspecto particular bastante bonito; hemos tenido en mano una muestra rojiza ó gris rojiza con muchas vetitas mas os- curitas y en ciertos lugares como aleonaditas; su peso específico es de 0,748. Se utiliza con mucha ventaja para pinas de ruedas y des- pués de hecha tablas ó tablones es propia para pisos y tablados como para cualquiera otra obra de carpintería. En otro tiempo la emplea- ban en el Brasil para la construcción de buques. En Puerto-Rico 396 APÉNDICE 1" SU USO común es para estantería de casas de campo. vSe esporta para Europa, en donde se usa para bastones, cafta ó mango de paraguas y de quitasol, se emplea también en ebanistería y para tornear. Llama, Cba. — Madera de peso y dureza regulares; testura fi- brosa, de color rojizo ó de rapé de España con vetas mas oscuras, las cuales se vuelven á veces listas undulosas ; después de pulida y de barnizada se pone muy agradable á la vista. La epidermis de la muestra que hemos tenido en mano se habia desprendido y enton- ces el color de la corteza era canela un poco mas amarillento inte- riormente, sus capas corticales se podian separar enteras las unas de las otras con mucha facilidad ; espesa como de una línea y media. Llocuaje, Cba. — Madera de corazón bastante duro, de color ro- jizo veteado algo mas subido, con la albura mas blanda y de color gris rojizo teñido de verdoso; aspecto fibroso; según el modo con que le toca la luz, se vuelve bastante lustrosa, y la albura parece entonces como sedosa. Su corte vertical examinado con el lente pa- rece bien fibroso, mientras el transversal parece de un color mucho mas subido; es bastante compacta y sin embargo con muchos poros bien finitos; sus zonas concéntricas están muy pronunciadas; es susceptible de pulimento, y después de barnizada el corazón toma un color amarillento veteadito y la albura se vuelve de color acei- tunado con vetas verdosas. Llorón, Cba. — Pigeon wood, Jca. — Gmtarda lucida y G. spe- ciosa. M. D. — G. '75L — Árbol silvestre que se eleva á 25 ó 30' y suministra una madera de buen peso y de dureza mas que regular, con testura fibrosa poco compacta y de grano bastante grueso ; su corazón es de color pardusco algo acanelado y jaspeadito á la par, mientras la albura es mucho mas pálida, algo amarillenta y veteada. 'En Jamaica es bastante apreciada para obras de carpintería, para el interior de las casas y también para tornear; el color de la se gunda especie es pardusco anaranjado. M Maboa, Cba. — Bastard manchinell, Trd. — Cameraria latifolia. M. D. — G. 650. — Árbol silvestre que se eleva como á 35 ó 40' de altura y el tronco bastante recto llega al diámetro de 8 á 12" ; su- ministra una madera buena y que se parece bastante al ébano, pero no es tan negra, bien pesada y cuyo corazón, muy duro, es de color pardo castaño bastante uniforme y casi sin vetas, las cuales, cuando existen, son poco pronunciadas, mientras la albura es gris algo te- ñido de rojo, y hace así contraste con el corazón; es también bas- tante dura. Corteza tosca y rugosa, de color ceniciento sobre un fondo achocolatado, con capas corticales compactas, bastante duras y parduscas; cara interior mas parda. Esa madera se utiliza para timones de carruajes y obras de carpintería. Macahuau, Cba. — Madera de poco peso, testura fibrosa y floja, dureza regular, de color y aspecto de la yaya de Europa, es decir, DE LAS MADERAS. 397 rojizo muy pálido, con jaspeado mas oscurito, cuya albura es blan- quecina y apenas teñida de rojizo. Corteza rugosa, bastante pesada, espesa como de línea y media, de color pardo achocolatado, con manclñtas blanco-amarillentas que parecen producidas por una sus- tancia resinosa, quebradiza y de rotura blanca y brillante ; epider- mis poca; las capas corticales parecen bien compactas, pero muy poco duras; su corte vertical es color de canela jaspeado de blan- quecino ; cara interior de igual color, pero un poco mas pálida. Macurije, Cba. — Cupania opositifolia. M. I). — G. 852. — Ár- bol silvestre que se eleva á 35 ó 40' de altura ; se cria en los lugares montañosos y su tronco recto llega al diámetro de 12 á 18" ; sumi- nistra una madera bastante apreciada para bajo techo, varas y cer- cas ; es dura, de buena resistencia, poco pesada y tiene el aspecto, la testura y el color del álamo de Europa ; es decir, que tiene el co- razón gris algo rojizo ó color de carne pálido, con zonas irregulares algo mas oscuritas, y la albura blanquecina ; de rotura limpia; ex- hala un olor fuerte; sirve para fábricas de casas, ya en las armadu- ras, ya en las puertas y ventanas ; se utiliza también en obras de carretería. Las hojas de ese árbol son apetecidas por las vacas y ca- ballos; sus frutos son un buen alimento para los cerdos, y de sus flores sacan las abejas una miel deliciosa. Maga, Prco. — Thespesia grandiflora. M. D. — G. 969. — Árbol silvestre no muy" abundante, que se debería propagar como siendo de adorno y á la vez de utilidad por su madera; se eleva como á 50' de altura, y el tronco, recto y bastante largo, llega al diámetro de 30"; la madera es de color de rosa cuando nueva y negra cuando vieja; es fuerte y se parte verticalmente. Su uso común es para es- tantes de casas ; se emplea también para hacer flautas , flautines, clavijas de guitarra y otras obras de esa especie; sirve también para muebles; es de mucha duración bajo la tierra y se considera como la mejor para las obras de madera cuyos cimientos hayan de ser de lo mismo ; su peso específico es de 0,677. Majagua, Cba. — Paritium elatum. M. D. — G. 972. — Árbol silvestre cuya altura es solo de 25 á 30', y el diámetro del tronco recto de 6 á 8"; suministra una madera blanca cuyo corazón lejí- timo es color ceniciento algo azulado, un poco veteadito, de as- pecto muy bonito y agradable á la vista; su peso específico es de 0,595 ; es muy porosa, muy flexible y sin embargo muy resistente ; por esa razón se emplea diariamente en la Habana para varas de quitrines y volantes, especie de carruajes especiales de ese pais y muy á propósito para transitar por los malos caminos, porque nunca se vuelcan y son muy agradables por su balanceo, que se puede comparar al de las hamacas de que tanto se usa. Corteza muy tosca de color chocolate pálido }' cuya parte interior es cenicienta ; epi- dermis bastante espesa; capas corticales como de línea y media, muy fibrosas y separándose fácilmente en muchísimas hebras ó ti- ras; cuando pertenece á vastagos como de dos años es muy buena para sogas. Magüira, masgüira, Cba. (Véase güira cimarrona.) Madera de lanza, Cba. — Lance wood, Trd. — Bois lance, Ant. 398 APÉNDICE 1° fr. — O^iatteria virgata. F. 95. — Árbol silvestre que se eleva co- mo á 25' de altura, y cuyo tronco derecho solo llega al diámetro de 6"; suministra una madera de grano fino, testura fibrosa y dureza regular; es muy flexible, elástica y bastante r*3sistente á la vez ; de color amarillo mas pálido que el boj de Europa ; se hiende con faci- lidad ; se utiliza para lanzas y varas de coche, tacos de billar, arcos de violin y para resortes; espuesta á la acción .del calor ó del agua hirviente se dobla con facilidad; sirve además para armaduras de casas, bajo techos, etc. De Cuba y de Jamaica la mandan á Europa en pestigas largas, cuyo diámetro es de 3 á 6 pulgadas ; corteza muy delgada. También llaman bois de lance á la rollinia midtiflora, de la cual ya. hemos hablado con el nombre de corazón cimarrón, cuya madera se utiliza con frecuencia para reemplazar el corcho, aplicándola á las redes de pescar. Malagu^eta, Prco.; pimiento, Prco., Cba. — Bois d'Inde, Ant. fr. — All spice tree, Jca., Trd. — Pementa vulgaris. M. D. — G. 112. — Árbol silvestre que se eleva de 45 á 50' de altura y mas, cuyo tronco, derecho y bastante largo, llega al diámetro de 15 á 18 y 24"; suministra una madera bien dura, bien pesada, de testura fina y compacta, cuya albura es color majon ó rojizo muy pálido, con ve- tas mas oscuritas y hasta morenitas, mientras el corazón es par- dusco rojizo, otras veces casi moreno, algo castaño, y en fin hasta casi negro por causa de los nudos; susceptible de buen pulimento; su peso específico es de 0,909. Es una de las maderas mejores y mas apreciadas de esos paises; muy fuerte y muy duradera; sirve para obras de carpintería, de ebanistería; su uso común es para estantes de casas ; se esporta bastante. Corteza poco rugosa, color de ceniza, con manchas ó trechos desiguales, los unos mas blanquecinos y los otros mas oscuritos, cuando la epidermis no se ha desprendido aun, como suele hacerlo, por placas á manel^a de la del plátano de Eu- ropa; en el acto de desprenderse la epidermis vieja es espesa como de un milímetro; color gris pardusco esteriormente y como de hoja muerta interiormente; escomo cornea y quebradiza, deja por de- bajo de sí la nueva epidermis ya formada, muy fina, de un color amarillento verdoso ; la corteza después de seca es espesa de una lí- nea, con las capas corticales de color chocolate ; olor propio. Mamey colorado, mamey sapote, Cba. — Lucn77ia mamosa. M. D. — G. 634. — Árbol frutal silvestre abundante en las Antillas y en el continente americano; se eleva á 45 ó 50' y su tronco recto llega al diámetro de 12"; suministra una madera de buen peso, de dureza muy regular, bien compacta y de grano fino; su color es bastante parecido al de la caoba, pero mas uniforme y mas rojizo, algo jas- peadito de oscuro; su peso específico es de 0,588. Su uso común es para estantes de casas, pero á nuestro parecer se la podría utilizar para la carpintería y la ebanistería; su corteza fresca huele á al- mendras amargas. Mamey amarillo, mamey de Sto. Domingo, Cba.; mamey macho, la variedad, ó mejor los individuos estériles ; mamey, Prco. (Véase albaricoque de Sto. Domingo.) DE LAS MADERAS. 399 Mamón, Cba. (Véase corazón.) Mamoncillo , amoncillo , mamón, Cba. ; maco, Trd. — Quenepe, Ant. fr. — Melicoca Mjv.ga. M. D. — G. 854. — Árbol frutal sil- vestre que se eleva á 40' de altura y mas; su tronco, bastante recto, llega al diámetro de 12 á 15"; suministra una madera de buen peso, de dureza mas que regular, de testura fibrosa y sin embargo bas- tante compacta, con el grano fino, de color blanco teñido de amari- llento, con muchas vetitas capilares algo mas subidas que le dan un aspecto disciplinado muy bonito ; tenemos á la vista una muestra de color un poco mas amarilloso, con primorosos remolinos que provie- nen de la presencia de nudos. En el corte vertical el canal medular está visible durante largo tiempo, pero va disminuyéndose poco á poco y acaba por desaparecer enteramente; en el corte transversal se ven las zonas concéntricas separadas por vetas capilares de color algo mas oscurito ; corteza áspera como de media línea, ni rugosa ni agrietada tampoco y casi unida, de color moreno algo verdoso, cu-' yas capas corticales parecen casi de igual color que la madera y con el lente se reparan en ella vetas color de azufre ; esa madera no tiene aplicación alguna , al menos que sepamos. Su peso específico es de 0,901. Mangle amarillo. — Mangle jaune. — Jellow mangrove, Trd. — Árbol bajito y tortuoso de los lagones, cuyo tronco corto Uega al diámetro de 4 á 6"; suminisira una madera de muy buen peso, de dureza mas que regular, de testura fibrosa y compacta, grano fino, de color gris muy claro, algo teñido de color de hojas muertas y jaspeadita, cuya albura escasa es mas amarillenta y menos jaspeada; es muy fuerte y parece muy conveniente para obras de carpintería de casas, como ligazones y armaduras ; sirve para curvas de canoas ; corteza rugosa no muy agrietada, pero sí un poco prieta, espesa co- mo de 2" escasas, cuyas capas corticales se separan fácilmente en capitas delgaditas, de color parduzco moreno cuando están juntas en el corte transversal. Mangle blanco, Prco., Cba. — White mangTove, Trd. — Avice- nia tomentosa y laíjuncularia racemosa, Goertn. M. D. — G.. 5G6. — Árbol Ijajito que se cria con abundancia en las orillas de los lagos, lagunas y en los sanitrales; se eleva como á 20 ó 25' de altura y el diámetro del tronco llega á 11"; su madera es muy buena, bien dura y bien pesada; testura fibrosa y compacta, de un color gris, con vetas ó undulaciones algo parduzcas, y cuando salen de los nu- dos forman remolinos, ordinariamente poco pronunciadas y con mu- chísimos puntitos mas oscuritos, que le comunican una vista muy agradable; sirve para viguetas y ligazones de casas, pero su uso mas común es para carbón bastante bueno y para leña; el peso es- pecífico del primero es de 0,861y el del segundo de 0,860. Mangle botón, Prco.; mangle botoncillo. — Button mangrove. — Mangle roche, Trd. — Conocarpus erecta. M. 1). — G. 383. — Ár- bol silvestre que se produce con abundancia á las orillas del mar, cuya altura es de 20 á 25' y el diámetro del tronco llega á 9 ó 10" ; suministra una madera muy dura, muy pesada, de testura fibrosa y sin embargo bien compacta y grano fino ; recien labrada es de color 400 APÉNDICE 1^ gris teñido de achocolatado claro, con muchas vetas capilares mas pálidas, mas ó menos undulosas y que le hacen como disciplinadito ; otras veces es color pardo, cuando haja sido labrado ha un tiempo bastante largo ; albura bastante espesa, de color blanquecino-rojizo claro ; la madera conserva durante largo tiempo el olor pantanoso particular de los lagones; su peso específico es de 1,009 ; se utiliza en la construcción de las canoas y de las lanchas cuyas curvas sumi- nistra ; se emplea para estantes de casas siendo muy durable cuando el terreno es arenoso ; sirve también para carbón de fragua ; su cor- teza es espesa como de una línea escasa, tosca y agrietada, de color moreno con trechos algo mas pálidos y con algo de ceniciento ; su interior es color de chocolate. Mangle negro, Trd. — Nos parece á nosotros igual al anterior, del cual difiere por el color mas oscuro de su madera que tiene igua- les aplicaciones. Mangle colorado ó zapatero, Cba., Prco. — Red mangrove, Trd. — RizopJiora mangle. M. D. - G. 1146. — Árbol acuátil abun- dante por las costas; se eleva á 25 ó 30' de altura y el tronco llega al diámetro de 10" ; suministra una madera de color rosado oscuro, la cual, por causa de su gran fuerza, se utiliza diariamente para fá- bricas de casas y otras obras de carpintería correspondiente con su poco tamaño, pero no dura mucho así, mientras que es casi incor- ruptible en el agua, especialmente cuando está casi sumerjida en ella; su uso mas común es para carbón, que es bueno, y para leña; es muy á propósito para calentar los hornos'de panadería, y las ho- jas sirven para curtir la suela, siendo mejor aun la corteza ; su peso específico es de 1,028. Mango, Prco., Cba., etc. — Mangotina. — Mangifera indica. M. D. — G. 2*73. — Árbol frutal natural de las Indias Orientales, pero que se ha vuelto casi silvestre en las Antillas y en el continente americano. Se le planta en las alamedas y caminos reales á propó- sito para ese objeto, por ser coposo y agradable su sombra : su altura llega á 50 ó 60' y el diámetro de su tronco, recto y no muy largo, á como 24 ó 30"; madera liviana, poco dura, de testura fibrosa, poco compacta, de color gris algo pardusco, con puntitos y vetas irregu- lares, formando en ella como dibujos pardos que contrastan con el color general ; después de barnizada parece casi nogal pálido; esa madera resistente y elástica á la vez puede reemplazar al fresno de Europa y servir pues para iguales usos, culatas de escopetas, curvas de carruajes, etc.; pero no se utiliza tanto como se deberla hacerlo; su peso específico es de 0,864. Marañen, Cba. (Véase pajuil.) Mahagua, mahault, Trd. — Stercularia cariiea.M. D. — G. 265. — Árbol silvestre bastante alto y que se cria con abundancia en la isla de Trinidad, en donde su corteza se aprovecha para sogas ; su- ministra una madera muy floja, muy liviana, muy blanda y muy fi- brosa, de un color blanco lijeramente teñido de pardusco rojizo muy , pálido, con muy pocas vetas ; corteza espesa de línea y media cuan- do seca, bastante lisa, de color ceniciento con las capas corticales DE LAS MADERAS. 401 fibrosas y que se separan con facilidad en hebras ó tiras fuertes ; el peso específico de esa madera es de 0.516. María, Prco. (Véase ocuje.) Maricao, Prco. — Árbol silvestre que se eleva como á 45' de al- tura y el tronco llega á 2' lv2 de diámetro; suministra una madera de color oscuro que se emplea en la maestranza militar d(3 San Juan de Puerto-Rico para cajas de fusil; en los campos su uso común es para armazón de casas, tablas y leña. Masa, Prco. (Véase copaiba.) Matillo, Prco. — Árbol silvestre cuya altura es como de unos 30' y el diámetro del tronco llega á 18" ; su madera es de color rojo y sirve para tablas. Mangle de uña, Cba. — Madera de peso y de dureza regulares, cuya albura, mas ó menos blanca, está teñida de rojizo que va vol- viéndose mas subido á medida que se va acercando al corazón, cuya parte esterior es casi color de caoba, mientras el centro es color cas- taño rojizo ó como achocolatado, con vetas, de las cuales la mayor parte son mas pálidas y las otras mas oscuras, lo que la hace muy bonita; testura como fibrosa y grano regular. Corteza bien com- pacta y bastante pesada, tosca, casi sin grietas ó con muy pocas, de color ceniciento, con manchas amarillentas ó color de ceniza, dis- puestas sin simetría sobre un fondo pardusco ; epidermis delgadito ; capas corticales densas, bastante duras y quebradizas , de color de canela, con vetas prietas y puntitos blanquecinos. Manzanillo, Prco., Cba., Vzla. — Manchinell, Trd. — Hi/pomane manzanilla. M. D. — G. 123. — Árbol silvestre de las costas que se eleva como á 25 ó 30' de altura, cuyo tronco recto y bastante largo llega al diámetro de 10 á 15", y suministra una madera muy apre- ciada para muebles de lujo y tan fácil de labrar como la caoba, cu- yas propiedades y duración tiene ; de dureza y peso regulares, tes- tura algo fibrosa y compacta, grano fino ; es de primoroso color gris amarillento teñido de pardusco, y quizás mejor color de hojas muer- tas pálido, con algunas vetas mas parduscas y á veces casi negras, que le dan un aspecto muy bonito y agradable á la vista; examina- da con el lente, su corte vertical parece bien fibroso y con muchas líneas capilares que no son otra cosa que vasos abiertos al labrarla, y con muchos puntitos masoscuritos que parecen provenir de la pre- sencia de una sustancia como resinosa; en el corte horizontal el color es mas oscuro y se ven las zonas concéntricas bien pronunciadas y mas oscuritas por el centro ó corazón ; con el lente se reparan algu- nos poros. Hemos tenido en la mano otra muestra de esa madera, con igual testura, dureza y peso, pero de color mucho mas pálido y de matiz casi uniforme, con las zonas concéntricas apenas visibles en el corte transversal, lo que proviene, á nuestro parecer, de que esa muestra salia de un árbol mas joven ; tal madera no se debe la- brar sino después de bien seca y de una larga esposicion á la intem- perie; su peso específico es de 0,674. María. (Véase ocuje.) Merey. (Véase pajuil.) Moca colorada, moca amarilla, Prco. (Véase liaba.) TOMO u 26 402 APÉNDICE 1°. Mora, Prco. (Véase fustete.) Mora. — Mora wood, Trd. — Mora excelsa. M. D. — G. 935. — Árbol silvestre social que se halla en la isla de Trinidad j en la Gu- yana, se eleva como á 80' de altura y su tronco, recto y muy largo, llega al diámetro de 18, 20 y á veces 30" ; los mas gruesos tienen siempre el corazón hueco, lo que es un defecto de bastante conside- ración, y como no se puede quedar en tierra mas de 3 á 4 años sin pudrirse no está puesto entre las mejores maderas en ese concepto, pero al contrario tiene la propiedad de conservarse muchos años su- meriido en el aerua sin dañarse; es muv bueno y muy conveniente para las construcciones navales, y para eso ya se la esporta para Inglaterra; sirve también para puertas, pisos y muchas otras obras de carpintería; esa madera no es muy dura j se parece bastante á la caoba hembra, pero su grano es mas fino y su testura mas fibrosa, de color rojizo oscuro ó pardusco y como veteado y jaspeado á la vez. Es mas conveniente que el roble de Europa para las construcciones de buques y sus ramas, naturalmente encorvadas, se aprovechan con ventaja para curbas de buques; su peso específico es de 1,029. Moral, Prco. — Árbol silvestre bastante abundante en la isla de Puerto-Rico, en donde se eleva como á unos 50' de altura, y el tron- co largo y recto llega al diámetro de 24"; suministra una madera de color claro y rompe horizontalmente; no tiene aplicación. Moruro, tengue , Cba. — Pitfiecolohiímifilicifolmm. M. D. — G. 1,050. — Árbol silvestre de las selvas montuosas, que se eleva á 50*^ de altura y cuyo tronco alcanza un diámetro de 18 á 24" ; suministra una madera muy dura que se utiliza diariamente en la isla de Cuba, en donde se la aprecia bastante para mazas de carruajes, solías y. otras obras de carpintería; hay de ella dos clases, una blanca y otra rojiza. Monkey bones. — Z'os macaque, Trd. — Árbol silvestre muy co- mún en los montes de la isla Trinidad ; se eleva á 45 ó 50 pies de altura, el tronco recto y bastante largo llega al diámetro de 10 á 15 pulgadas y suministra una madera muy pesada, muy dura, de tes- tura bien compacta y grano fino ; su color es pardo teñido de rojizo con vetas mas pálidas; muy fuerte, muy resistente y portal razón muy apreciada para muchas obras de carpintería, y especialmente para varas de carretas á que se aplica diariamente ; su peso especí- fico es de 1,030. Multa, Prco.; Eugenia, M. D. — G. 1125. — Árbol frutal silves- tre que solo se eleva como á 15 ó 20' de alto á lo mas, y el diámetro del tronco es de 8". Su madera, que es bastante dura y resistente y de color claro, sirve únicamente para carbón. Musara, Trd. — Brosimum alicastncm. M. D. — G. 114. — Árbol silvestre que se eleva á 50 ó 60' y cnyo tronco alcanza un diámetro de como 24" ; suministra una madera muy bonita, muy fuerte, muy resistente y muy apreciada para carpintería del campo y también para obras mucho mas finas: de peso muy regular; de dureza re- gular, testura fibrosa, bastante compacta y grano fino ; de color gris rojizo ó quizás mejor teñido de color de carne, con vetas par- duscas ó del mismo color, pero algo mas oscuritas ; la parte corres- DE LAS MADERAS. 403 pondiente á la albura es á veces amarillenta, otras veces del mismo color, pero algo mas pálida. Muñeco, Prco. — Árbol silvestre que se produce con abundancia por el O. de la isla de Puerto-Rico; se eleva á 30 ó 35' de altura y el diámetro del tronco es de 12", y suministi^a una madera floja de color cenizo j rompe verticalmente, cuyo uso común es para tabla- zón de casas de campo. Muñeco de costa, Prco. — Árbol silvestre cuya altura es de 30' y el diámetro del tronco de 12" ; su madera, de mediana dureza, es de color amarillo y rompe verticalmente y solo sirve para leña. N Naranjo agrio, Prco., etc. (Yéase limón.] Negra lora, Prco. — Árbol silvestre que se eleva á 30' de altura y cuyo diámetro del tronco es de 10 á 12" ; su madera, de color en- carnado y recia, rompe verticalmente; es porosa; su uso común es para construcción de casas de campo y estacadas. Nogal ceniciento, Cba.; nuez, Prco. — Jiiglans cinérea. M. D. — G. 140. — Árbol silvestre frutal que se cria en el interior de las grandes Antillas y en el continente americano. Se eleva á 40 ó 45' de altura, y el tronco derecho y bastante largo llega al diámetro de 18 á 24"; suministra una madera algo porosa pero muy buena y que participa de las propiedades del nogal europeo ; es de color rojo os- curo y rompe verticalmente ; se emplea en tablas y cuartones para obras de carpintería de casas. Nazareno, Cba. — Hymened florihicnda. M. D. — G. 1006. — Árbol silvestre bastante grande y corpulento, cuya madera, de peso y dureza regulares, testura fibrosa y compacta, grano fino de color canela claro, con vetas ó undulaciones algo mas oscuritas; la de Costa Firme es color de violeta; susceptible de pulimento, muy propia para embutidos, para bastones muy bonitos, flexibles y á la vez muy fuertes. En Cuba, su corteza hervida con agua sirve, según dicen, para teñir de amarillo canario bien sólido. o Ocuje, Cba.; maría, Prco.; galba, Trd.; cachicamo, Vzla. — Ca^ lophylluru calaba. M. D. — G. 877. — Árbol silvestre rauy hermoso y muy coposo, que se eleva á 55 ó 60' de altura y cuyo tronco largo y recto llega al diámetro de 3' y mas ; suministra una madera teni- da por incorruptible, bastante liviana, de poca dureza, de testura fibrosa, de color rojizo algo mas pálido que la caoba hembra y que se parece mucho al álamo colorado de Europa, tanto por su aspecto general como también por su testura y grano; el corazón es mas colorado que la albura, la cual lo será tanto menos cuanto menos 404 APÉNDICE !•. vecina esté de él, y vice-versa. En su corte vertical examinado con el lente se ven muchísimas líneas capilares que son vasitos abiertos al labrarla, conteniendo una sustancia resinosa formando así un sin número de vetitas mas oscuritas; la corteza seca es parduzca, con vetas prietas interiormente, esteriormente tosca, mas pálida con manchas blancas, espesa como de 1 1¡2 pulgada; su peso específico es de 0,655. Esa madera es muy apreciada para fábricas y obras de carpintería ; se usa diariamente para soleras, llaves, construcciones navales, y cuando el tronco es de tamaño mayor entonces sirve para curiaras ó canoas de una sola pieza. Sembrado en líneas sirve á la vez ese árbol para alamedas hermosísimas y cercados muy buenos, cuyas ramas inferiores se pueden quitar periódicamente y aprove- charse entonces para leña, como se suele hacer en Europa para el álamo y otros árboles empleados para cercas y que de ese modo se j vuelven muy derechos y muy hermosos ; lo que sucedería igual- mente para ese árbol, que, llegado á su tamaño regular, se tumba- ría para sacar provecho y utilidad de su madera ; esa operación ha de repetirse periódicamente de siete en siete años; se la podría también aplicar con ventaja al mango, al mamey, cada vez que se desea tener sus troncos bien rectos ; se debe siempre tener cuidado de dejarle una copa bien fornida á ñn de no entorpecer la vejeta- cion y por consiguiente el desarrollo ulterior. Ortegon, Prco. {Véase hortegon.) Pajuil, Prco.; marañon, Cba. — Merey, Trd., Vzla. — Caschew tree. — Anacardium occidentale. M. D. — G. ^'íílí. — Árbol frutal silvestre tan abundante en las cercanías de la ciudad Bolívar, que estos lugares y en otros de la república de Venezuela se llaman mereyales, abundante también en los lugares arenosos de las Anti- llas, én donde se eleva á 25 y 30' de altura y el tronco llega al diá- metro de 10 á 20''. Suministra una madera muy fuerte, muy dura y que se aprecia mucho para solas, mazas de carruajes, yugos y otras obras de carpintería del campo; su color es rosado; su uso común en Puerte-Rico es para carbón y leña; su peso especííico es de 0,488. Palma real, Cba.; palma de yagua, Prco.; tacarigua, Trd. y Vzla. — Oreodoxa regia y O. olerácea. M. D. — Q. 99. — Primorosos ár- boles silvestres que dan á la vejetacion de esos ricos países su sem- blante particular y característico. Se elevan derechos á 70' y mas de altura, y el tronco, verdaderas columnas vejetales, llega al diámetro de 12 á 15"; suministran tablas muy buenas y muy duraderas para pisos y paredes de casas de campo, y especialmente para fabricar cocinas, caballerizas y cercados, etc. Se emplean sin labrar y como se sacan del árbol, de manera que la parte esterior y la mas dura, siempre un poco convexa, se pone siempre por afuera. Después de labrada esa madera es primorosísima y durísiriia, muy compacta, de testura fibrosa y de color achocolatado pálido, con algunas vetas DE LAS MADERAS. 405 lineares y paralelas mas oscuritas ; ordinariamente una ^e las caras es mucho mas pálida que la otra ; tenemos á la mano, al escribir estos renglones , una muestra cuto color es pálido amarilloso como el de hojas muertas ó gris amarillento con vetas parduzco-rojizas de las que unas son mas oscuras que las otras, mientras que la cara opuesta es casi de color uniforme, las vetitas siendo casi del color del fondo. Palma de coco, cocotero, Prco., Cba., Vzla. — Cocotier, Ant. fr. — Cocoa nut tree, Ant. ingl. — Coceas nucífera. M. D. — G. 91. — Árbol frutal que se produce especialmente en las orillas del mar, pero que se estiende bastante lejos en el continente americano: en efecto, lo hemos hallado en el interior de las misiones del Caroni, en las cercanías de la ciudad de Bolívar, como á 80 leguas de la em- bocadura del Orinoco y hasta en San Fernando de Apure, 80 leguas mas arriba, en fin, en Caracas; pero en este último lugar, bien que á primera vista el árbol sea tan vigoroso v lozano como en los demás lugares, sin embargo en verdad no es así , porque sus frutos mas pequeños están reducidos á la concha y no tienen carne, están va- cies y por consiguiente abortados, por causa sin duda de la altura sobre el nivel del mar y de la temperatura, consecuencia natural de ella. Se eleva hasta mas de 60' de altura y el tronco llega al diáme- tro de 5 á 6". Suministra una madera que se usa en tablas como la de palma de jugua y de la cual la parte que corresponde con las raices es mucho mas apreciada por ser mas bonita y mas dura y sirve para obras de lujo ; su peso específico es de 0,501 y 0,865. Palo blanco, Cba. — Cuassia, Ant. fr. — Bitter ash, Trd, — Qua- sia amara. M. D. — G. 865. — Árbol silvestre bastante común en Trinidad y Guyana y mas escaso en las demás Antillas; se eleva como á unos 20' de altura 3^ el tronco llega al diámetro de 4 á 6" á lo menos. Suministra una madera muy liviana, muy blanda, de tes- tura fibrosa y floja, grano grueso, de color blanco amarillento, des- igualmente teñido de pardusco y solo en las partes que corresponden con el corazón ó con los nudos; de gusto muy amargo y de un olor muy particular no desagradable; como madera no tiene uso, pero se hacen con ella copas torneadas que sirven para echar agua que se bebe como estomacal después de haberse quedado en ellas algún tiempo. Palo bobo. (Véase baga.) Palo de caja, Cba. — Smidelia cominia. M. D. — G. 267. Árbol silvestre que se eleva como á 15' de altura y cuyo tronco llega al diámetro de 15 á 18" y suministra una madera que no resiste á la esposicion á la intemperie, pero que es muy á propósito para estan- tes, varas, cajas, duelas, etc., y se emplea bastante para esos usos en la isla de Cuba. Palo de clavo, Prco., Cba. — Geroflier, Ant. fr. — Cloves wood, Trd. — C aryophylhis aromaticus. M. D. — G. 1,115. — Árbol de las Indias Orientales, aclimatado en las Antillas, especialmente en Trinidad, Granada, Martinica y Guadalupe; se eleva á 25' de al- tura y el tronco bien derecho llega á 4 ó 5" de diámetro y suminis- tra una madera de muy buen peso, de dureza mas que regular, de 406 • APÉNDICE lo. testura fibrosa y compacta y grano fino, de color variado; en efec- to, la parte correspondiente con la albura blanca es casi color ca- nela oscuro, después viene una lista grande aceitunado muy claro, y por fin otra casi majon pálido, con algunas vetas poco pronuncia- das, de las cuales algunas se juntan entre sí por el centro ; además es algo jaspeada : no tiene aplicación ninguna; corteza de como 2 lí- neas de espesor, poco rugosa, con muchas grietecitas desiguales, blanca, cuya epidermis se desprende con facilidad y deja en pos de sí una superficie lisa : su interior es color de chocolate algo clarito; sin olor ni sabor cuando seca; su peso específico es de 0,897. Palo de moscada, moscadero. — Muscadier. — Nutmeg wood. — Myristica moscJiata. M. D. — G. 215. — Primoroso árbol de las Indias Orientales, aclimatado perfectamente en las Antillas y espe- cialmente en Trinidad, Granada, Martinica, Guadalupe, etc.; se eleva como á 30' de altura, en forma de pirámide, con los ramos es- tendidos y largos, de los que los primeros están como á 5 ó 6' del suelo; el tronco llega en su parte inferior á 5 y 6" de diámetro y su- ministra una madera de peso regular, poco dura, de testura fibrosa y fioja, y sin embargo grano muy fino, de color gris un poco como de hojas muertas claro, teñido de moradito hacia el centro, sin al- bura perceptible, con muchas vetas paralelas bastante pronunciadas y mas oscuritas ; parece muy fuerte ; corteza rugosa apenas agrie- tada, de color gris pardusco verdoso, cuya parte interior ó capas corticales son color de chocolate algo claro , espesa como de 1'", sin olor ni sabor tampoco cuando seca ; su peso específico es de 0,597. Palo de pan, castaño, Prco., Cba. — Pain bois, Ant. fr. — Bred- nut, Trd. — Artocaiyiis incisa. M. D. — G. 113. — Árbol frutal natural del Japón, pero perfectamente bien aclimatado en las Anti- llas y en el continente americano, en donde se halla con bastante abundancia; se eleva como á 70' de altura, con^gruesas ramas esten- didas; el tronco, bastante largo, mas ó menos derecho, llega al diá- metro de 25 á 30"; suministra una madera de un eolor gris amari- llento , teñido de pardusco mas ó menos oscuro , con zonas ó undulaciones bastante grandes y blanquecinas : tenemos á la vista otra muestra mas liviana y muchísimo mas amarillenta , de la cual el corazón es color como de hojas muertas ó casi mas oscuro, y la albura de un amarillo que tira un poco al canario, con manchas rec^ titas que la dan un aspecto disciplinadito muy bonito. Mas liviana que pesada, poco dura, pero sí bien fuerte, resistente y elástica. Es muy apreciable para muebles, para fábricas de casas; además los chinos la emplean mucho en las construcciones navales; criándose con facilidad casi en cualquier clase de suelo y creciendo con bas- tante prontitud, si hubiese necesidad de propagar ese árbol seria con bastante provecho y utilidad. Corteza bastante lita ó poco ru- gosa y de color de ceniza ; su peso específico es de 0,495. Palo de gallina, Prco.; palo de pollo, Cas. — Acnistus arlores- cens. M. í). — G. 627. — Árbol silvestre que hemos hallado en Puerto-Rico, Trinidad y hasta Caracas, de 15 á 25' de altura, con el diámetro del tronco de 4 á 6"; suministra una madera blanda, de color blanco oscuro y que rompe verticalmente : su uso común es DE LAS MADERAS. 401 para leña y armazón de casas del campo; saca su nombre de eso que las gallinas y pollos que comen sus frutos se mueren. Palo hue¿o, Prco. — Se eleva á 40' de altura y el diámetro del tronco llega á 24"; el color es blanco oscuro ; su u^o común es para leña V armazón de casa. Palo pollo, Prco. — Pterocarpns draco. M. D. — G. 1033. — Árbol silvestre que se eleva como á 40' de altura y cuyo tronco llega al diámetro de 14 á 18" ; suministra una madera de color blanco y que rompe horizontalmente. En la maestranza de San Juan de Puerto-Rico se construyen guarda fuegos con ella : los particulares solo se sirven de ella para leña; su peso específico es de 0,554 y el de la madera sacada de las raices de 0,138. Palo santo, Prco. — Árbol silvestre cuya altura es de 30' ó mas, y el diámetro del tronco de 8 á 12"; suministra una madera floja de color ceniciento y que parte verticalmente : se usa en varazón de casas y estacadas. Palo de rosa, Prco. — Yieques, etc. — Cordia gerascantJncs. M. B. — G. 607. — Árbol silvestre que se eleva á 30' de altura y cuyo diámetro del tronco es de 18"; suministra una madera color rosado y rompe verticalmente : se emplea en la construcción de casas de campo y en la de buques; es muy apreciada también para muebles. Se ha aplicado el nombre de palo de rosa á algunas maderas dife- rentes llevadas de la América del Sur á Europa Una de ellas es el palissandre de los franceses; otra muy poco usada y llamada por los ingleses rose woord, candel vood y también siceet icood, proviene del amyris balsamifeo'a. El palo de rosa de los ingleses es el arayris Montana, que llaman también yelloio candel y yelloiu sander en Ja- maica. Se lia llamado así también al erithroxyllum areolatum ; por fin, en la isla de Trinidad se llamea palo de rosa ó hicTiory á la hroio- nea, á causa del color de sus flores : su madera, de dureza regular y testura fibrosa, es muy bonita y de un color gris amarillento; sirve para arcos muy buenos. Pandamis candelabriim . — Pandano como candelabro. M. D. — G. 206. — Árbol del Japón, pero que está bien aclimatado en las Anti- llas, en donde se cultiva para el adorno de los patios y de los paseos públicos; se eleva como á 30' de altura y el tronco tiene un diámetro de 5 á T' ; suministra una madera que á primera vista parece la de una palmera, pero mucho mas compacta y mas dura, de aspecto muy particular, disciplinada, con líneas mas ó menos larguitas irregular- mente dispuestas y desiguales, de color canela pálido, sobre un fondo gris amarillento muy pálido. La parte que corresponde á la corteza de los demás árboles es muy dura, muy desigual y rugosa, de color gris pardusco con manchas blanquecinas ó cenicientas; otras hay color rojo, sangre de buey, que se comunica á la madera correspondiente á ellas, lo que la hermosea mucho : es susceptible de pulimento; no tiene aplicación, pero á nuestro parecer se la po- dría utilizar en ebanistería para embutidos de lujo; su peso especí- fico es de 0,929. Paraíso, prusia, Cba. (Véase lilao.) . • Pataban, Cba. — iS'os parece, según lo que nos ha sido referido. 408 APÉNDICE 1«. una especie de mangle : la muestra que hemos tenido en la mano no es ni muy liviana ni muy pesada tampoco; de dureza regular, tes- tura fibrosa y grano bastante fino, de color de canela claro ó par- dusco rojizo, jaspeadito ó con vetas mas oscuritas ó mas pálidas y formando encuentros en el corazón. Corteza muy tosca con surco?i irregulares y grandes, de color pardo oscuro con manchas mas ó menos estensas y cenicientas, epidermis poca; capas corticales casi color de chocolate ; espesa como de 2'''; cara interior pardusco claro con vetas prietas. Pata vaca, Trd. — Bauhinia megalandra. M. D. — G. 945. — Árbol silvestre que se eleva como á25' de altura y el tronco, bastante corto y no muy derecho, llega al diámetro de 6"; suministra una madera de peso y dureza algo mas que regulares, muy flexible y sin embargo bien resistente, de color rojizo algo teñido de amarillento, con vetas parduscas; tiene un poco el aspecto del álamo colorado de Europa, pero no tan rojizo, y algo mas oscurito, con hermosas vetas capilares que al juntarse forman listas pequeñas mas oscuritas y hasta morenas, las cuales se vuelven remolinos primorosísimos que toman aspecto jaspeadito; albura poca, blanquecina y haciendo así contraste con la madera; su peso específico es de 1,023. Corteza es- pesa de 1 1|2 ó 2 líneas, muy tosca, con grietas grandes y profun- das ; de color gris ceniciento oscuro sobre fondo achocolatado : se hacen con esa madera arcos muy apreciados y muy buenos. Pardillo. (Véase capa.) Pama, Trd.; mapou. — Pisonia nigricans. M. D. — G. 302. — Árbol silvestre que se eleva á 24 ó 30' á lo mas de altura y cuyo tronco llega al diámetro de 4 á 5" y suministra una madera muy li- viana, muy floja, de testura muy fibrosa, elástica y cujo aspecto á primera vista la hace parecer de una palmera, de color casi unifor- me, gris amarillento muy pálido, sin albura; corteza delgadísima muy pegada á la madera, poco rogusa y casi sin grietas, de color pardusco oscuro teñido de rojizo ó achocolatado. Sirve para los tacos de los remos de las embarcaciones pequeñas. Palo mulato. — Wild tamarind, Trd. — Bois mulátre, Mart. — PenthacletJira Jílamentosa. M. D. — G. 285. — Árbol silvestre que se eleva como á 50' y mas de altura y cuyo tronco, largo y derecho, llega al diámetro de 15 á 18" ; suministra una madera no muy apre- ciada, pero que sin embargo tiene algunas aplicaciones, y sin duda para nosotros seria susceptible de muchas otras ; de grano muy fino, de testura compacta, de peso mas que regular, dureza buena, de un color moreno pálido algo teñido de rojizo, con zonas ó listas mucho mas claras, en las cuales el color moreno se ha casi desvanecido para dar lugar al rojo que le Reemplaza : parece casi el manzano de Eu- ropa ; sus semillas son muy oleojinosas y quizás se podrían utilizar para sacar aceite; su peso específico es de 1,076. Pendejuelo, Prco. — Árbol silvestre que se eleva á 50' de altura y el tronco llega al diámetro de 18" ; suministra una madera de co- lor ceniciento y rompe oblicuamente : su uso común es para tablas de casas de campo. »- Péndula, Prco. — Citharexyllwm cuadrangulare , M. D. — G. DE LAS MADERAS. 409 560. — Árbol silvestre cuya altura llega á 50' y el trono©, bastante recto, al diámetro de 18"; suministra una madera bastante dura, de color pajizo y rompe oblicuamente; tiene esa particularidad que el epidermis, espeso y color ceniciento, va desprendiéndose de la cor- teza bajo forma de tiras largas que se quedan bastante tiempo col- gantes al rededor del tronco y de las ramas ya viejas. Su uso común es para tablas, viguetas, cuartones, alfajías, etc. : la jente del pais hace con ella sus tiples ó guitarras; su peso específico es de 0,'753 y 0,722. Pimiento, Cba. (Véase malagueta.) Pino, Cba. — Pinus occidentalis . M. D. — G. 105. — Árbol espe- cial de la isla de Pinos y que se halla también en la isla de Cuba, bastante alto, cuya madera se aprovecha y es tenida por muy bue- na, de buen peso y de dureza regular, testura fibrosa y bastante compacta, grano bastante fino, de color de canela muy claro, algo rojizo, con vetas lineares mas oscuritas y algunas cintas ó listas ver- ticales algo mas pálidas. Piñón espinoso, Trd. — Erythrina corallodendron. — Madre del cacao, Trd. — Bucare, Vzla. — E. umbrosa. M. D. — G. 1080. — Primorosos árboles que crecen con mayor prontitud y se elevan, el último especialmente, como á 50' de altura y suministra una madera liviana, poco dura, bastante quebradiza, de la cual no se saca utili- dad; sin embargo, da un carbón regular. Sirve el último especial- mente para dar somlra al cacao. Pico de gallo, Cba. — Cynometra culensis. F. 180. — Árbol sil- vestre que suministra una madera de peso muy regular, de buena dureza, testura compacta y grano fino. Hemos tenido á la mano al- gunas muestras de ella y eran de diferentes colores : una era de co- lor pardusco rojizo, algo jaspeadita de mas oscurito, cuya parte es- terior ó albura era mas pálida; otra mucho mas clara, casi sin estar teñida de rojozo, pero sí jaspeadita; en fin, la ultima era gris ama- rillenta ó quizás mejor aceitunada, con vetas mas oscuras. Corteza tosca y rugosa, de color chocolate con manchas cenicientas; epider- mis poca; capas corticales espesas como de \"\ bastante densas y duras ; cara interior mas oscura. Pomarrosa, Prco., Cba., Vzla, — Pomme rose, Ant. fr. — Jam- losa vídgaris. M. D. — G. 1119. — Árbol frutal silvestre abun- dante en las Antillas y en el continente americano ; se eleva á 40' de altura, cuyo tronco mas ó menos largo y derecho llega al diáme- tro de 15 á 18" y suministra una madera bien fiexible y fuerte á la par, de testura fibrosa, bastante pesada, bien compacta y grano fino; de color gris rojizo casi uniforme, con pocas vetas undulosas que se juntan hacia el centro, poco pronunciadas; albura apenas distinta por ser casi de igual color; corteza como de 2'" li2, poco rugosa con grietas, de color ceniciento y las capas corticales de co- lor casi como de chocolate pálido. Su uso común es para arcos de bocoves y barriles, y para carbón de fragua; su peso específico es de 0,792. Poma malaca. — Jamlosa malaceiisis . — Primorosísimo árbol frutal, naturalizado en las Antillas y muy común en la Trinidad; se 410 APÉNDICE 1°. eleva como á So' ó algo mas de altura j el tronco llega al diámetro de 12 á 15"; suministra una madera de poco peso, poca dura, de testura como fibrosa, no muy compacta y grano bastante fino, de color pardusco rojizo claro, con vetas undulosas muy poco pronun- ciadas, algo moiré ; albura mucho mas floja; corteza muy rugosa, espesa como de V" 1|2, oscura, de color pardusco, con manchas ce- nicientas, cuyas capas corticales son color chocolate : esa madera no tiene aplicación y pesa 0,588. Pui,Trcl.; arajuaney, Gna. ; flor amarilla, Yzla. — Ebéne yert, Tecoma serratifoUa. — T. Leuccccylon. M. D. — G. 531. — Árbol silvestre que se eleva á 45 ó 50' de altura y hasta mas, cuyo tronco largo y derecho llega al diámetro de 18, 24 y hasta 30" : se conocen tres variedades de la misma especie botánica ó quizás tres especies que se suelen solo diferenciar por el color de la madera: son el blanco, el negro y el verde, que es la mas apreciada. La ma- dera es muy dura, de mucha fuerza y duración, muy densa, bien pesada, testura compacta y grano fino, de un color gris pardusco, con vetas algo mas oscuras : tiene de particular que tocada con una sustancia alcalina, sea por ejemplo el amoniaco, se vuelve al mo- mento rojizo-amarillenta; sucede lo mismo á las manos después de haberla labrado, cuando se las lava con jabón. Muy apreciada para fabricas de campo y de las ciudades; muy á propósito también para obras de carpintería fina, para tornear y además para ebanistería; su peso específico es de 1,215. Pois cloiix marrón, Trd. — Árbol silvestre que se eleva á 40 ó 45' de altura y cuyo tronco, largo y derecho, solo llega al diámetro de 18 á 20" y suministra una madera primorosa, de dureza y peso re- gulares ; de testura fibrosa bastante compacta y grano fino; de color gris agamuzado, con vetas paralelas algo mas oscuras á veces her- moseada con remolinos que parecen algo inoiré ; albura poco mas pálida y mas amarillenta; corteza espesa como de 1 lj2 línea, bas- tante rugosa, muy poco agrietada, color pardo ceniciento ó pardo morenusco, cuyas capas corticales algo fibrosas son color canela. Esa madera, que parece bien fuerte y cíe buena resistencia, no tiene aplicación, á lo menos que sepamos; sin embargo nos parece á pro- pósito para obras interiores de casas. Purgo macho. (Véase ácana.) Q Quiebra hacha, Cba. — Coj)aifera Mmenmfolia. M. D. — G. 392. — Árbol silvestre que se eleva á 35' de altura y cuyo tronco llega al diámetro de 12 á 15"; suministra una madera de mucha dureza, muy primorosa y casi todo corazón, de un color moreno rojizo, con vetas mas oscuras; albura escasa blanquecina y tanto mas dura cuanto mas cercana esté del corazón: susceptible de buen pulimen- to; es muy apreciada por su grande fuerza y su mayor duración en el agua, de suerte que se dice que se petrifica en ella. Por tales ra- zones se la emplea mucho en las fábricas del campo. DE LA.S MADEEAS. 411 R Eabo-junco, Prco. — Árbol silvestre que se eleva á unos 30' de altura y cu^^o tronco llega al diámetro de 12 á 14" y suministra una madera flexible de color blanco, que se utiliza en armaduras de te- chos de casas de campo. Roble. — Por esta denominación se señalan muchos vejetales di- ferentes y que varian casi con la isla ó la comarca en que uno está viajando : en efecto, el roble amarillo es el citharexylon caudatum. M. D. — G. 560; El roble blanco. Cha. , el tecoma pentaj^iliyUa. M. D. — G. 531. — Árbol silvestre que se eleva como á 30' ycujo tronco llega al diáme- tro de 6 á 8" ; suministra una madera de dureza y peso regulares, testura fibrosa bastante compacta y grano bastante fino, de aspecto muy bonito y á veces como moiré, de color gris pardusco teñido de amarillento ó color de canela claro, disciplinado de mas pálido, casi sin albura, por ser de color uniforme la muestra entera; otras veces la hemos visto de un hermoso color gris aceitunado y con jaspeado algo mas pardusco ; con aspecto moiré ; corteza muy tosca, pardusco- grisácea, algo verdosa, sobre un fondo mas oscuro; capas corticales color de chocolate. Esa madera, muy fuerte }' muy resistente, se puede utilizar para obras de carpintería fina y también para algunas del campo. Roble prieto, Cba. ; roble, Prco. — Catalpa longisilicua. M. D. — G. 526. — Primoroso árbol silvestre que se eleva á mas de 50" de altura y cuyo tronco, bastante recto, llega al diámetro de 18'' ; suministra una madera de tev\ra, publica- das por sus sabios directores. ^,^ ^ "' Las Antillas, en las que estamos escribiendo estos renglones son, como todos lo saben muy bien, países esencialmente agrícolas y á la sola agricultura, perfeccionada como conviene y como es de, desear, toca hacerlos ricos v felices. En efecto, esas comarcas se hallan en las circunstancias físicas y climatéricas mas favorables para la ma- yor producción posible de vejetales útiles ; además la escasez de brazos , haciendo en general la mano de obra demasiado cara, vuelve improductivas la mayor parte de las fábricas que se plantan genebalidades. 419 en tales países cuando no tienen relación íntima é inmediata con la agricultura del pais, como la tiene la fabricación del azúcar, etc. Puesto que es del suelo ó de la tierra que se ha de entregar al cul- tivo ó volver fábrica regular de productos vejctales, cualquiera que sea el objeto á que se les destina, depende enteramente el buen éxito de tales empresas. Todo lo que acabamos de decir para las Antillas se debe aplicar para el continente americano. Principiare- mos por manifestar algunos pormenores sobre tan importante asunto y procuraremos señalar en las menos palabras posibles los principa- les caracteres físicos que pueden guiar para reconocer las varias clases de suelo ó terreno. Seria preciso en primer lugar enseñar los procedimientos empleados para hacer el análisis químico de la tierra que ha de cultivarse, pero no podemos engolfarnos en tales descri- ciones, porque los pocos que podrían aprovecharlas hallarán tales métodos mucho mas completos en las obras que tratan de ia química agrícola y porque eso no seria de ninguna utilidad para la mayor parte de nuestros lectores, que no tienen ninguna práctica de las manipulaciones químicas. La capa mas superficial de la tierra es la parte de que debe ocu- parse para la agricultura y constituye lo que se suele llamar terre- nos agrícolas, á la geolojía agrícola toca dar de ella buenas disposi- ciones y sobre todo hacerlas de tal manera que estén al alcance de todos ; pero por desgracia tales trabajos no han sido publicados hasta ahora, á lo menos. que sepamos, y lo sentimos en el alma: tendre- mos pues que limitarnos á dar un resumen sucinto de lo que se ha escrito sobre el particular hasta hoy dia. La composición ó constitución de la capa superficial ó arable de la tierra, aunque resulta de la mezcla de varias rocas vueltas polvo mas ó menos fino por medio de los diferentes cataclismos que han trabajado nuestro planeta en las diferentes épocas geolójicas que ha tenido que atravesar, y además de eso sigue esperimentando diaria y continuamente, bajo la influencia poderosa de los ajentes físicos y químicos naturales, una desagregación mas ó menos completa de sus partículas, varia muchísimo. Tal variación ó diferencia en la composición química y física de las tierras arables proviene de que las varias capas que la constituyen, no teniendo igual oríjen, ha- brán de tener una composición diferente según la constitución geo- lójica de los lugares en donde se estudia, bien que muchas veces la composición de los suelos arables no corresponde con la del terreno geolójco en que está descansando. En primer lugar tenemos que señalarlos terrenos formados en el sitio mismo donde se ha descompuesto ó pulverizado la roca que los sostiene ; tales terrenos en general son muy poco espesos y su fera- cidad es muy mediocre. Las fuerzas físicas y químicas naturales que obran de manera que se desagreguen las rocas á fin de que sus de- tritos se vuelvan tierra arable, son las siguientes : la pesadez, la electricidad, el calórico, la acción continua ó repetida de las aguas llovedizas, del oxíjeno del aire, del ácido carbónico, las propieda- des mas ó menos hygrométricas de sus partes, las raices de los veje- tales que van introduciéndose por sus grietas, etc.; pero tales cau- 420 APÉNDICE 2°. sas obran muy poco á poco, y su acción se va disminuyendo rápida- mente á medida que una capa formada de sustancias orgánicas, des- pojos vejetales, va cubriendo mas la roca y hasta desaparece por completo cuando la tienen enteramente privada de la influencia di- recta de tales aj entes. Los terrenos de aluvión, cuya formación es muy reciente y que presenciamos casi diariamente, están formados de cascajo, arena y limo, sustancias arrastradas por los rios que las dejan sentarse en algunos lugares, de modo que constituyen así ter- renos compuestos de capas sobrepuestas y correspondientes con las varias crecientes que tuvo el rio. Tales terrenos, que constitu- yen las vegas de las Antillas y del continente americano , son muy feraces y será siempre muy provechoso facilitar artificialmente su formación. Los vientos y las corrientes hacen lo mismo en ciertos lugares de las orillas del mar, dejando sentarse tierras y arena ar- rastradas por los rios y llevadas por las olas ; tales terrenos son también muy fértiles, pero estando siempre al nivel de las grandes mareadas, es preciso, para aprovecharlos para la agricultura, diques y obras muy costosas que les defiendan contra la invasión ulterior del mar, lo que no se podria emprender con alguna ventaja en las Antillas á causa de lo caro de la mano de obra y porque hay todavía en estos paises mayor proporción de terreno riquísimo no entregado á la agricultura por falta de brazos y de caudales suficientes. Los Mogates ó Maganos, que ocupan en Francia una estension bastante considerable en la costa del Océano, son formados de gra- nos de arena cuarzosa muy finos; no son muy raros tampoco en cier- tos parajes de las Antillas, como por ejemplo en la costa norte de la isla de Puerto-Rico, Camuy, verbigracia, en donde les hemos ob- servado, provienen de la acción de los nortes que obligan las olas á arrastrar las arenas y á amontonarlas. Los terrenos paludosos, cuyo nombre señala bastante su oríjen, gozan propiedades tan variadas como lo son las diferentes circuns- tancias locales que les han dado lugar : tales terrenos son muy co- munes en las Antillas, en la América del Sur, y la facilidad conque se les puede mejorar las mas veces ha de llamar sobre ellos la atención de los agricultores. El espesor de la capa del suelo en que penetran , viven y se des- arrollan las raices de los vejetales es muy variable; en efecto, redu- cida á algunos centímetros en los terrenos malos y pobres, alcanza para los buenos de O m. 25 c. á O m. 35 c. y mas, ó de 10 á 12 pulga- das. Según el señor de Gasparin, agrónomo francés muy distinguido, se llama suelo la capa superior del terreno hasta la profundidad en donde principia á cambiar su composición mineralójica. Tal suelo se puede dividir en suelo activo ó la parte que s^ mezcla con el man- tillo, recibe la infiuencia atmosférica y las sales solubles y en la cual se verifican los fenómenos de la vejetacion y que está bajo el impe- rio de los labradores ; por debajo de esta capa se encuentra el suelo inerte, que aunque teniendo igual composición mineral no está apro- vechada por el cultivo por ser demasiado profundo; después de aquella segunda capa del momento que aparece una composición mineral diferente, aquí principia el sub-suelo , que puede estar GENEKALIDADES. 421 también compuesto de algunas capas diferentes, cuya composición mineral ó g-eolójica puede variar también hasta que se halle la últi- ma ó la capa impermeable : en ciertos casos particulares el suelo puede descansar sobre la capa impermeable, el sub-suelo faltando mas ó menos. El espesor del suelo activo depende pues esclusivamente de la mayor ó menor profundidad de las labores, de manera que será siempre ventajoso que sea lo mas espeso posible; no se puede poner ninguna regla general sobre la conveniencia ó utilidad que habrá de mezclarle mas ó menos frecuentemente con el suelo inerte : lo que está evidentemente sugeto á la composición mineral relativa á estas dos partes del suelo general. Si el suelo activo está por ejem- plo ya estenuado, mientras el suelo inerte gozado mucha feracidad, mezclarlos será en ese caso muy provechoso, y vice- versa. El sub-suelo, especialmente cuando está vecino de la superficie, tiene mayor inÜuencia sobre la bondad del terreno, sea por causa de su propia naturaleza, sea por la influencia ó acción que tiene sobre el desagüe : en efecto, comarcas enteras hay que son estériles úni- camente por causa del sub-suelo. Los terrenos que se pueden cultivar difieren entre sí, química- mente, mucho mas por las proporciones relativas de las sustancias minerales que les constituyen que por la naturaleza química de es- tas mismas sustancias : tales terrenos tienen en general la composi- ción química siguiente : sílice, alumina, cal, magnesia, potasa, sosa, óxido de hierro, óxido de magnesio, ázoe, mantillo y agua ; esas sustancias están en tales suelos, tan pronto mas ó menos aisladas y así entremezcladas, como combinadas entre sí y también con algu- nos ácidos. No hablaremos en particular de ninguna de estas sustancias, por- que eso nos llevarla muy lejos de nuestro objeto y porque esos cono- cimientos se encuentran en las obras de química: diremos lo mismo del análisis químico de los terrenos, que se compone de opera- ciones químicas delicadas, las cuales necesitan conocimientos quí- micos bastante estensos y además bastante práctica del labora- torio. Sin embargo nos parece conveniente y útil decir al paso algunas palabras sobre el humus ó mantillo, porque constituye la parte mas rica del suelo y la por consiguiente de que saca su valor y su fera- cidad. Tal sustancia resulta de las alteraciones de los detritos veje- tales determinadas por la acción combinada del oxíjeno del aire, de la humedad y del calórico ; tales sustancias abandonadas al aire pierden de su agua de composición y una proporción relativamente menor de su carbono, de tal suerte que el producto de esta especie de fermentación pútrida incompleta es mas rico en carbono que las sustancias vejetales de que proviene y constituye el mantillo. Ese cuerpo proviene de oríjenes variados y habiendo nacido en circuns- tancias muy diferentes no es nunca bien definido ni idéntico tam- poco. Tratado por el agua.de potasa se disuelve y el líquido se vuelve prieto mas ó menos oscuro ; con unas gotas de un ácido cualquiera echadas en ese líquido deja separarse y sentarse una 422 APÉNDICE 2**. sustancia prieta t coposa que se llama ácido úlmico, húmico, hu- mus, ulmina, etc.; tal cuerpo es casi insoluble en el agua, pero puede esperimentar un segundo grado de fermentación que le vuelve soluble y le transforma en estracto de mantillo; durante esta se- gunda alteración hay producción de ácido carbónico j de algunos ácidos orgánicos. La propiedad que goza de absorver el oxíjeno del aire para producir ácido carbónico, da razón muy bien del papel ventajoso y muy importante que tiene en la vejetacion. Los terre- nos mas feraces contienen en general desde 0,05 ó 5{100, 0,08 ó 8[100 de este cuerpo y la feracidad se va disminuyendo á medida que la proporción va aumentándose, de tal manera que los terrenos que contienen de él como 0,25 ó 25[100 son casi siempre estériles, necesitando por consiguiente de un abono particular y de un modo especial de cultivo. Cuando haya sido producido por la descomposi- ción de vejelales muy ricos en tanino contendrá un poco de ese ácido, tal terreno se llama agrio, como sucede diariamente en los platanales y es impropio para muchos cultivos ; se remedia ese incon- veniente con mayor facilidad al favor de la cal con que se le abona. A la presencia del mantillo en proporción bastante fuerte en su suelo, las Antillas y el continente americano en general deben una gran parte su lozana vejetacion y su admirable feracidad, por esa razón hemos hablado de él un poco mas detenidamente. Es preciso tener en cuéntala densidad de las tierras que han sido clasificadas por Shübler, como sigue, según su composición. Arena calcarra^ 2,822; — id. silicosa, 2, '753; — barro flaco, 2,'701; — id. gordo, 2,652; — tierra arcilosa , 2,591; — id. de jardin, 2,332; — mantillo, 1,225. El barro flaco contiene 40[100 de arena silicosa fina. El barro gordo 24[100 y la tierra arcillosa 10,'75[100; la arcilla pura no contiene arena, su color es gris azulado y al to- marla entre los dedos es suave á manera de los cuerpos grasos ó mejor del jabón. La tierra de jardin es liviana, prieta y feraz; con- tiene 52,4 de arcilla; 36,5 de arena silicosa; 1,8 de arena calcárea; 2 de carbonato de cal y 7 de humus ó mantillo. Bien que no se pueda sacar exactamente la composición de una tierra de su densidad, es posible sin embargo adivinarla así aproxi- madamente; diremos aquí pues en general que las tierras mas den- sas son las mas ricas en silice, mientras las mas livianas contienen mayor proporción de mantillo y al favor de esos dos términos ó datos estremos se podrá juzgar los intermedios. Eso puesto, el co- nocimiento del peso de un metro cúbico de tierra, así como se la halla en el campo mismo que hay que entregar al cultivo; sumi- nistra datos muy útiles para la ejecución dé los trabajos agrícolas haciendo adivinar su composición y por consiguiente conocer los abonos que hay que emplear para volverla mas apropiada á los vejetales que se quiere producir, pero se debe tener presente que la tierra después de sacada ocupa en general un volumen ó ta- maño 1|10 mayor que cuando estaba en el campo. Para que se pueda sacar provecho de estos datos en la práctica agrícola, ponemos aquí el cuadro del peso de un metro cúbico de algunos suelos : Arena fina y seca, 1,399 kilogramos á 1,428 hil.; — id. húmeda, GENERALIDADES. 423 1,900 kil.; — arena fósil arcillosa, 1,'713 k. á 1,799 k.; — tierra vejetal liviana, 1,214 k. á 1,400 k.; — id. arcillosa, 1,600 k.; — barro, 1,900 k.; — mantillo, 0,828 k. á 0,857 k.; — tierra mezcla- da con arena y con cascajo, 1,860 k.; — id. gorda ó barrosa mez- clada con piedrecitas, 2,290 k. Se llama higroscopicidad á esa propiedad que tienen las tierras para detener en sus partículas mas ó menos agua, sin dejarla escur- rir; tal propiedad proviene á la par del estado físico j de la compo- sición química de las partículas de la tierra j favorece muchísimo la feracidad de los suelos; bien que el grado de higroscopicidad no pueda dar razón esacta de la feracidad de un terreno, por su medio se pueden sin embargo sacar mayores ó menores probabilidades de ella. Según Schübler, el poder higroscópico de las varias clases de tierras es como sigue : 100 partes de arena silicosa contienen 25 ; — id. de yeso, 27; — id. de arena calcárea, 29; — de barro flaco, 40; — de barro gordo, 50; — de tierra arcillosa, 60 ; — de arcilla pura, 70; — de tierra calcárea fina, 85 ; — de mantillo, 190 ; — de car- bonato de magnesia, 456; — tierra de jardin, 89 de agua. La permeabilidad de las tierras ó esa propiedad que tienen de de- jar pasar el agua con mayor ó menor facilidad por entre sus partí- culas no está en razón directa con su higroscopicidad. Tal propiedad es de mayor importancia para la agricultura, porque teniendo rela- ción casi directa con la capilaridad , favorece mucho y facilita el movimiento de los gases y de los líquidos por entre las partículas de los terrenos, y por esa razón su papel es muy importante en las ope- raciones que necesitan el drenage ó desagüe y las irrigaciones. La frescura es una propiedad de mayor consideración para la agricultura y está en relación casi directa con la higroscopicidad de los varios elementos que forman el suelo, su esposicion y la compo- sición del sub-suelo ; para que una tierra esté considerada por sana es preciso que 2 ó 3 dias después de un chubasco fuerte no contenga sino una mitad mas de higroscopicidad que en su estado noi-mal, y para que no se llame seca es preciso que durante la estación seca, después de 8 dias de sequia, se quede todavía con 10[100 de agua. El señor de Gasparin llama frescas á las tierras que habitualmente contienen 15 á 25[100 de agua, j secas á las que detienen menos de 10];100 de ese líquido. La facilidad que tienen las tierras para vol- verse secas al aii"e está casi en relación inversa con su higroscopici- dad. Cuando una tierra se va desecando, su tamaño disminuye, va encojiéndose, y así tiene mas veces una acción mecánica nociva so- bre las raices que pueden estar dañadas, aplastadas y hasta lieridas. Según Schübler, 1,000 partes de las tierras siguientes esperimentan al desecarse la disminución ó encojimiento siguiente : Tierra calcá- rea fina, 50 ; — barro flaco, 60 ; — id. gordo, 89; — tierra arcillo- sa, 114: — id. de jardin, 149 ; — arcilla pura, 183; — mantillo, 200. Las tierras espuestas al aire húmedo gozan la facultad de absor- ver una cierta cantidad de agua, lo que es muy favorable, porque conservan la proporción de humedad necesaria para una buena ve- getación, y constituye, especialmente en los paises cálidos, una cali- 424 APÉNDICE 2^ dad preciosísima. Bajo ese punto de vista Schübler clasifica las tier- ras como sigue, principiando por las que absorven menos : Arena silicosa. id. caliza; barro ñaco, id. gordo; tierra caliza fina, id. ar- cillosa, id. de jardin; arcilla pura; humus ó mantillo. Las tierras no se limitan á chupar la sola humedad del aire, sino que á la vez absorven los gases húmedos. Lo que ha sido estudiado solamente para el oxíjeno q;:e pierden al desecarse para volver otra vez á condensarle cuando cojen humedad, j las cosas siguiendo así favorecen muchísimo los actos de la vejetacion, como lo tenemos ya señalado mas arriba en el discurso preliminar, de esa parte. Según los trabajos de Schübler, 100 partes de las tierras señaladas aquí hablan, después de un mes de esposicion, absorvido el oxíjeno como sigue : Arena silicosa, 1,6; — id. caliza, 5,6 ; — barro flaco, 9,3; — tierra caliza fina 10,8; — barro gordo, 11,0; — tierra arcillosa, 13,6; — arcilla pura, 15,3 ; — tierra de jardin, 18, O ; — humus ó mantillo, 20,3. La constitución física de las tierras j su composición química in- fluyen muchísimo sobre la facultad que poseen de detener el caló- rico j por consiguiente sobre su calórico específlco ; consideradas bajo ese punto de vista Schübler las coloca como sigue : Arena cal- cárea, 1,00 ; — id. silicosa, 9,56; — barro flaco, 1,69; — id. gordo, 7,11; — tierra arcillosa, 6,88; — arcilla pura^ 6,67; — tierra de jardin, 4,48; — tierra caliza, 6,18; — humus ó mantillo, 4,90. El calentamiento de las tierras por el sol constituye una propie- dad de mayor consideración para la práctica agrícola y depende por el mismo lugar, de la naturaleza de la capa superficial del suelo, de su composición química, de su grado de humedad y en fin de su in- clinación. El color del terreno tiene mucha influencia sobre su ca- lentamiento, y se ha observado que, con igual esposicion al sol, los suelos coloridos daban cosechas mas prontas que los blancos; los mismos terrenos secos o húmedos han ofrecido, después de esperi- mentos comparativos hechos con cuidado, una diferencia de 1 á 8" menos para los últimos, lo que proviene sin duda de la evaporación que se verifica en su superficie. Pero no es todo el conocer aproximadamente la naturaleza y las propiedades mas ó menos favorables al cultivo de un terreno dado y bien que tales conocimientos basten para escojerlo, necesita enton- ces otras cosas para estar apropiado ; para recibir las siembras y hacerlas prosperar á fin de sacar de ellas todo el provecho posible. Para sembrar es preciso siempre preparar el suelo después de ha- berle escojido convenientemente para el mayor producto de los ve- jetales que hay que cultivar, tomando en cuenta lo que tenemos di- cho mas arriba, y su composición química que estamos prontos para señalar. ¿Pero quién en las Antillas se ocupa de preparar el suelo como conviene? quién ha pensado solamente en hacerlo! En gene- ral se limpia mas ó menos el terreno, y, después de escarbado las mas de las veces como las gallinas, se le entrega la semilla, y tan poderosa es su fertilidad que á pesar de tan inaudito descuido y de tan perjudicial abandono, produce cosechas muy regulares y hasta abundantes muchísimas veces. Cuando uno se toma el trabajo de es- GENERALIDADES. 425 plicar á los labradores de tan afortunados países el cuidado con que en Europa se prepara el suelo antes de sembrarle, le miran como maravillados y casi atontados y contestan : « Eso es mucho trabajo, costaría un dineral ; en fin, la tierra nos da bastante tal cual la cul- tivamos y nos basta así. » Error de mayor consideración que es un obstáculo casi invencible á los adelantos y á las mejorías agrícolas de esas comarcas y que aprovecha solo á la pereza y á la vagabun- dería, que son como dos llagas crónicas, no diremos incurables, pero que hacen muchísimo perjuicio á esos países en favor de los cuales estamos hace ya muchos años gastando nuestros desvelos. Supongamos un terreno vírjen y por consiguiente montuoso, es decir, cubierto de bosques ; lo primero que hay que hacer es des- montarle ; se principiará pues por cortar todos los árboles útiles para las construcciones navales ó civiles, tales son los ausubos, los capas, los ucaros, los majuguas, los cedros, las caobas, las yabas, chicharrones, quiebra-huesos, los robles, algarrobos, ébanos, gua- yacanes, etc. y demás cuyos troncos se han de labrar cuadrados cuando son bastante gruesos, casi en el acto de tumbarlos, y se han de depositar en parajes donde no estén espuestos á la acción de las lluvias ni á la del sol tampoco. Tal faena demanda gastos que espan- tan á la mayor parte de los que se dedican al cultivo de las tierras, pero no reparan que así tendrían un tesoro guardado para el dia en que se necesitará de él. Todos los demás árboles y los trozos inútiles así como las ramas fuertes, se habrán de reducir á carbón después de sacadas de ellos buenas soleras, ejes y viguetas : así practicada la industria del carbón bastaría para cubrir todos los gastos del des- monte y se quedaría además libre el valor de las maderas útiles. Muchos se niegan á dedicarse á la fabricación del carbón, porque faltando con demasiada frecuencia buenas vías de comunicación, es costoso llevarle á las ciudades á donde se vendería con mucho pro- vecho, pero se le puede muy bien tener guardado en montones cu- biertos de yerbas y tierra hasta que se presente la ocasión favorable para aprovecharle y sacar de él la debida utilidad, lo que necesa- riamente debe suceder algún dia. Es costumbre en las Antillas y también hasta en Europa entre los campesinos que las cortes de los árboles que han de servir para fá- bricas han de practicarse cuando la luna está en su cuarto men- guante : si hemos de creer en la esperiencia diaria de los que viven en el campo, si debemos tener confianza en lo que nos han referido y de las comparaciones hechas con varias maderas de la misma clase, de las que unas habían sido cortadas en cualquier época, mien- tras las otras lo habían sido en el menc:uante de la luna, tenemos, á pesar de lo que dicen los sabios, alguna tendencia para participar de tales ideas, que se pueden seguir muy bien porque tal práctica no lleva detras de sí ningún perjuicio. Las maderas útiles así recojidas, el carbón vendido ó guardado, sería preciso, como en Europa lo hacemos siempre, pero que casi nunca se ha practicado en estos países, destronconar y estirpar las raices, lo que serviría para producir mucho carbón de la mejor cali- dad : tales fragmentos quedándose en la tierra son un estorbo muy 426 APÉNDICE 2''. grande para el uso de los instrumentos y ustensilios de labor perfec- cionados, que tantos brazos ahorran en el cultivo de las tierras; y quizás el abandono en que está tal práctica en las Antillas es una causa poderosa del atraso en que se encuentra el cultivo por la gran cantidad de brazos que se necesita y que escasean. Tal operación no se debe ejecutar en los terrenos muy inclinados porque no permiten el uso del arado ni de los demás instrumentos que remueven el suelo y desmenuzan la tierra, y además en ese caso su presencia es útil, porque se opone á que las aguas llovedizas se lleven consigo la tierra arable, como sucede tantas veces. Para ese trabajo bastan la hacha, la cuña y el estirpador. En lugar de seguir lo que acabamos de se- ñalar, después de tumbados todos los árboles se los suele quemar, así como todas las malezas, y eso hecho se escarba mas ó menos la tierra y se procede á la siembra : qué barbaridad ! En los terrenos inclinados se debe principiar por abrir una zanja transversal á la parte superior y después algunas otras, según la es- tension de la ladera ó pendiente, á fin de desaguar las aguas de llu- vias, cortando así las corrientes que descarnan el terreno y suelen dejarle enteramente desnudo de capa vejetaly con surcos profundos que son otros tantos espacios inútiles y conductores de la tierra á los llanos ; tales terrenos no son propios sino para pastos artificiales con yerba de Guinea, cuyas raices fijan el suelo, que vuelto move- dizo con otras siembras se lo llevarían las aguas consigo. Si el terreno que hay que entregar al cultivo está tan bajo res- pecto á los que le rodean que en él se detengan ó se estanquen las aguas desbordadas de los rios ó avenidas de las alturas, es preciso rodearlo y cruzarlo con zanjas mas ó menos anchas y mas ó menos profundas, según el ma^'or ó menor cúmulo de agua que pueda in- vadirlo. Con las tierras que se estraen de tales zanjas se nivelan las desigualdades á fin de evitar estancaciones parciales ; tales terrenos tienen por lo general el sub-suelo todo formado de barro tenaz que no consiente la filtración de las aguas, de tal modo que para apro- vecharles es preciso desaguarles por el drenaje, tan empleado en Europa, donde lo hemos visto producir maravillosos efectos y que consiste en colocar de cierto modo y á cierta profundidad en el ter- reno tubos de barro porosos, lo que es muy costoso en Europa mis- ma, y por esta razón, á nuestro corto parecer, de aplicación difícil en las Antillas, en donde se les puede reemplazar muy bien, muchí- simo mas barato, abriendo zanjas con el arado y el ci abaron tirado por una muía, buey ó caballo. Tal operación fácil y ecvLómica per- mite aprovechar terrenos muy feraces porque soq así todos aquellos en que el agua estancada ha dejado su depósito, y además de eso tales lugares se vuelven mucho mas saludables para el hombre y también para los animales, haciendo desaparecer con los miasmas que se exhalan de ellos, como lo tenemos dicho y esplicado en el discurso preliminar del Compendio de terapéutica vejetal de las An- tillas, que constituye la segunda parte de esta obra. Las zanjas del rededor han de quedar abiertas, cuidando de limpiarlas cuando se necesita, mientras las que van cruzando el terreno se han de llenar de piedrecitas angulosas, dejando entre sí vacíos ó especies de ca- GENERALIDADES. 42*7 nalitos subterráneos por donde ha de correr el agua ; si escasean las piedras se las reemplazará por maderas incorruptibles como la ya- ya, el mangle negro, la quiebra hacha, etc., hechas pedazos, y por encima se aplicará una capa de ramitas de los mismos árboles dis- puestas en haces, y en fin se llena y nivela con la parte correspon- diente de la tierra sacada; de esa manera han desaparecido las zan- jas cuya superficie se cultiva, y sin embargo existen los conductos subterráneos necesarios para el desagüe y las aguas se reúnen en las zanjas abiertas y de estas van á algún paraje mas bajo, hoj'o, sumi- dero, laguna ó rio, etc. Los terrenos cuyo suelo contiene muchas piedras mayores que el cascajo exijen composición previa antes de la siembra : la faena consiste entonces en recojer el mayor número de ellas y especial- mente las mayores, y convertirlas en cal cuando están á propósito ó amontonarlas sobre el campo mismo, según las circunstancias. Los montones, dice el señor licenciado Dau, han de ser circulares, dispuestos en cono y como de unas 2 varas de diámetro por la base y colocados en líneas paralelas á fin de no estorbar la labranza. Sa- bido es en efecto que muchas piedras, aunque sueltas, son un es- torbo grande para el arado, para el escarificador, la grada, el de^iyerbador y demás instrumentos necesarios para los trabajos agrícolas y que reemplazan con tanta ventaja y economía á la azada, por desgracia tan empleada todavía, y que no debería emplearse mas sino en los lugares en donde no se pueden aplicar los utensilios seña- lados. Según el antedicho señor Dau, tales montones de piedras se pueden aprovechar, de manera que en lugar de disminuir la es- tension del terreno la aumentan al contrario: basta para eso reuni- da la primera camada de piedras, arrojar sobre ellas tierra y estiér- col para llenar los intersticios que habrán natural y necesariamente quedado entre ellas; puesta la segunda camada se adereza también con tierra y estiércol, y así seguidamente hasta concluir cada mon- tón y después se siembra yerba de Guinea, introduciéndola raiz con una parte de su tallo entre las piedras : tales montones serán pues otros tantos montículos que producirán bastante forraje y no se der- rumbarán porque las raices tendrán sugetas las piedras, que así guar- dadas se podrán aprovechar un dia ú otro, tan pronto para construir calzadas, fabricar casas, como para hacer cercas, que en tal caso se podrían sembrar como los montones y hasta de maiz, ó convertir en cal cuando se necesitara : además sirven para guarecer las plantas contra los vientos. El suelo no puede rendir buenos y abundantes productos si no se prepara la tierra vejetal como conviene. Después de desmontado el suelo es preciso limpiarle de todas las malezas que le cubren y amontonarlas en tantos montones cuantos sean suficientes para cubrir la mayor parte de la superficie de la tierra : á tales montones se deben agregar para mejor efecto male- zas traídas de los caminos reales, en lugar de dejarlos podrir en ellos, ramas de las cercas, plantas nocivas y parásitas arrancadas, pencas de palmas y cuantas materias vejetales análogas se puedo encontrar á la mano : después de seco bien todo, se le aplica el fuego á fin de que todo arda bien, reduciéndose á cenizas : tal combustión 428 APÉNDICE 2°. se ha de practicar de noche, porque hay menos viento y porque la combustión siendo entonces y por esta causa algo mas lenta, todo se quema mejor y la tierra se encuentra algo torreficada, lo que le ha- ce mucho favor: además de las cenizas que se quedan en su superfi- cie y que son para ella un abono magnífico, las semillas malas son destruidas por el fuego y así perecen á la vez muchísimos insectos ó sus huevos y crisalides. Todo eso hecho se trata de abonar el suelo si ya ha producido mu- chas cosechas ó si necesita alguna composición particular apropiada á la clase de vejetal que se ha de cultivar en él; pero en la mayor parte de las grandes Antillas especialmente, no se habla de abono, porque hasta ahora se han podido siempre escojer para las siembras terrenos muy ricos, mientras que en las de barlovento ya ha llegado para algunas de ellas el tiempo de abonar las tierras y de cambiar anualmente las cosechas. En efecto, en las circunstancias ordina- rias, y cuando es posible, se debe evitar con mayor cuidado este- nuar el terreno, y para conseguir tal objeto es necesario variar los cultivos de tal manera, que cada cosecha restituya al suelo lo que la precedente habrá sacado de él, y para eso se ha de hacer suceder las plantas las unas á las otras de tal manera, que se produzca ma- yor proporción de sustancias orgánicas útiles en el tiempo mas corto y con el menos abono posible; pero como se han de reparar á la vez en el valor intrínseco del producto, de modo que salga siempre el mayor posible, es preciso al sembrar los vejetales escojer siempre por amalga la especie mas productiva y la que conviene mejor á las costumbres y clima del pais en donde se trabaja. Se llama abono á toda sustancia, cualquiera que sea su oríjen, ca- paz de conservar y hasta aumentar la feracidad del suelo, restitu- yéndole lo que los vejetales sacan de él cada año ó mejor cada cose- cha, y además mezclando con él mayor proporción de alimento para las plantas que hay que sembrar á fin de que den el mayor pro- ducto posible : el abono ha de corresponder pues con la composición química de las cenizas de las plantas que han de ser cultivadas en él. Sabido es en efecto que la composición química de los vejetales varia mucho, no tanto por los principios elementales que contienen, sino por las varias sales minerales que necesitan para su normal vejetacion y su mayor alimentación. Las sustancias de oríjen orgá- nico proporcionan al descomponerse oxíjeno, hidrójeno, carbono y mas ó menos ázoe, cuya mayor proporción sacan de la atmósfera, como ya lo tenemos dicho en el discurso preliminar : tocante á los óxidos minerales v á las sales, les encuentran en el suelo sea naturalmente, sea por medio de los abonos que se mezclan con él á fin de remediar lo que le falta naturalmente ó sus pérdidas y necesidades, consecuencia necesaria del cultivo. Los vejetales tienen la propiedad de escojer en el suelo las sales que les corresponden y retienen solamente aquellas, como resulta de los esperimentos agrícolas y los muchos análisis de los Sres. Boussingault, Payen, etc., y demás sabios: en efecto, entre las plantas, las unas se cargan de sal marina en un suelo en que otras sacan solamente una pequeña proporción de tal sustancia, mientras se cargan de otra GENERALIDADES. 429 masa propósito para su organización. Supuesto esto, se habrá pues de conocer la naturaleza del suelo que se quiera esplotar y también la composición química de las cenizas de las plantas que hay que cultivar, á fin de poder escojer el abono mas á propósito para sacar de ellas el mayor producto posible. Tales datos se encuentran reu- nidos en las obras de química que tratan de la agricultura; sentimos en el alma no poderlos tener aquí reunidos, pero eso nos llevaria demasiado lejos de nuestro objeto y quizás hemos ya dado demasia- da estension á ese párrafo. Se da el nombre de abonos naturales á los que se componen del estiércol de los animales domésticos, sea empleado solo, sea mezcla- do previamente y como conviene con tierra y con cal, y después de trabajado como conviene se lo estiende en la superficie del suelo que hay que abonar; pero como en las Antillas el sistema de estabu- lación es desconocido y muy raras veces aplicado , habrá siempre muy poco estiércol de que disponer. Pero no será así de los abonos artificiales, que se pueden casi siempre preparar en el lugar mismo donde se necesitan : en efecto, basta para eso reunir sustancias orgánicas, tan pronto vejetales como animales y mezclarlas con algunas minerales, tales como la cal mas ó menos cáustica, los fosfatos ó huesos pulverizados, la are- na mas ó menos fina, especialmente si el suelo que hay que abonar es muy compacto y barro desmenuzado, cuando el terreno es dema- siado esponjoso. Tales compuestos se preparan del modo siguiente : debajo de un techado de 3'aguas se forma un círculo como de unas cuatro varas de diámetro, con estacas clavadas en el suelo vertical- mente, como de 2 varas de largo, distantes una de otra como de unas 9 á 12 pulgadas y por la parte interior se forran con yaguas ú otra cosa cualquiera á propósito. Todo así dispuesto, se pone dentro del círculo una camada de 9 pulgadas de espesor formada de toda clase de estiércol ó despojos animales y por encima se estiende otra capa espesa como de 4 pulgadas, formada de arena fina; después viene otra camada de estiércol igual á la primera y en seguida una de arena y se sigue á estratificarlas así hasta que esté lleno el círculo : toda esta aglomeración ha de mantenerse húmeda, rodándola por arriba todos los dias con agua, ó si posible es, con orines y con to- das las aguas domésticas, que no se deben desperdiciar nunca, por- que contienen siempre sustancias orgánicas en disolución y en sus- pensión á la vez, y por eso constituyen un abono muy bueno ; se ha de emplear cantidad suficiente de líquido para humedecer el mon- tón, pero no tanto que se derrame ó se escurra por su base: tal operación sirve para hacer desarrollar en la masa la fermentación pútrida ó descomposición cuyo objeto es convertir todas estas sus- tancias empleadas en humus artificial. Lleno y prensado un depósito se procede á formar otro ú otros, según la cantidad de abono ferti- lizante que se necesita para las tierras compactas y tenaces. Los de- pósitos ó círculos preparados ya como lo tenemos enseñado se es- tiende por encima : 1° una capa de estiércol; 2° otra de arena igual en espesor á la anterior; 3" otra de estiércol de 3 á 4 pulgadas; 4^ una de cal que no debe pasar de una arroba; 5" otra de ceniza ; 430 APÉNDICE 2*. 6° una de sal de comer, como 5 libras bastan, luego estiércol, etc.; con este mismo orden hasta llenar el círculo, prensando toda la masa y humedeciéndola como queda referido. Se puede reemplazar la arena con el cisco de carbón vejetal, el coco, el polvo calcáreo ó de granito recojido en las calles y calzadas, el polvo de ladrillos y hasta barro tostado: así se obtiene un compuesto fertilizante y esti- mulante á la vez, propio para abonar las tierras compactas muy te- naces. Para las tierras demasiado esponjosas se preparará un compuesto estimulante y fertilizante á la vez, lo mismo que el que se aplica á las tenaces, con la diferencia de que en lugar de emplear arenase la reemplazará por barro bien desmenuzado : tales suelos antes de haber sido abonados como conviene, no adhieren bastante á las raices de los vejetales y se secan hasta tal grado, que las plantas perecen por falta de humedad; lo contrario sucede con los suolos compactos y demasiado tenaces. Según el señor Dau, á todo compuesto para cualquiera clase de suelo se le ha de agregar precisamente cierta proporción de azufre en polvo finísimo para matar los insectos contenidos en él y precaver su reproducción : dos á tres onzas de flor de azufre esparcidas con igualdad sobre cada camada de las diferentes sustancias que la for- man, son bastante. Los terrenos ferruginosos necesitan mayor pro- porción de cal en su abono. Siempre, según el señor licenciado Dau, de la Habana, se da á la tierra una fertilidad estraordinaria y muy duradera, haciendo sufrir al terreno la acción del fuego hasta torreficarle, y ese señor indica un método muy injenioso y económico para hacerlo, pero sentimos no poder referirlo aquí, porque eso nos llevarla algo lejos de nuestro objeto. La incineración así practicada destruye completamente los insectos y las semillas de las plantas perjudiciales que existen en el terreno, calcina las conchas, caracoles, la arena y las piedras calcá- reas que están mezcladas con él, y este agregado de cal, unidas á las cenizas resultantes de la combustión de las sustancias vejetales em- pleadas, forman un compuesto magnífico. Sabido es en efecto de to- dos los labradores que en los lugares donde hubo hornos de carbón ú hogueras hechas con montones de yerbas secas y raices sacadas de los campos arados, hay mayor lozanía en la vejetacion de las plan- tas, que dan mucho mayor producto, y sin embargo, en tales lugares la tierra no ha recibido nada mas que el beneficio de la torrefacción. En Cuba los vigueros echan sus semillas en esta tierra y á pesar de no gozar de sombra moderada, produce hermosas posturas de taba- co, sin que las molesten la germinación de las otras semillas ni los insectos que no existen en ella, porque han sido destruidos por el fuego. En China admírala paciencia de los labradores, que reúnen cuan- tas materias combustibles pueden encontrar, las amontonan en mu- chos puntos de la superficie que se ha de cultivar, cubren esos mon- tones con hojas grandes y por encima echan una capa de tierra de cierto espesor : aplican fuego al combustible y entretienen la com- bustión todo el tiempo que les es posible, para que la tierra sufra GENERALIDADES. 431 un cierto grado de torrefacción, tan convencidos están de la escelen- cia de ese procedimiento ; en Cataluña j en otras muchas partes se hace lo mismo. Segan los esperimentos con cuidado hechos en Europa, el me- jor abono para una planta son sus mismos despojosverdes y jugosos que se entierran á su pié cuando vivaces, y es tambieia el mas económico. Para que una planta pueda cultivarse con ventaja y utilidad por abono verde es preciso : lo que esté apro- piada al cuma y á la naturaleza del suelo; 2° que vejete con vi- gor, sin necesitar de abono ninguno y que prospere en un terreno casi estéril ó muy poco feraz; 3" que su semilla sea barata; 4" que se pueda desarrollar enteramente durante el discurso de una esta- ción ó dos lo mas ; 5'' que produzca un volumen grande de raices, tallos y hojas; 6° que tape perfectamente el suelo con sus tallos y sus hojas á fin de que las malas yerbas estén ahogadas y no puedan vejetar; 7° que se pueda enterrar con facilidad con los instrumentos aratorios; 8^ que sus tallos y sus hojas contengan una proporción fuerte de sustancias azoadas ; 9° que después de enterradas en el suelo se descompongan con facilidad y prontitud ; 10, y en fin que contengan bastante humedad. Todas las plantas herbáceas pueden en general servir para abonar la tierra enterrándolas en ella cuando están aun verdes y próximas á florecer: todos los agrónomos de mas reputación las tienen en efecto portan fertilizantes como los mejo- res compuestos; son los mas económicos, mas fáciles de conseguii' y no exijen de parte de quien los emplea conocimientos científicos, lo que es una ventaja que no hay que despreciar. En Nueva-Orleans se suele abonar con matas y con frijoles prontos para florecer : se pueden usar para eso los frijoles caballeros y los de bollo ó de carita, pero con el cuidado de enterrarles cuando están para flore- cer, porque si se les queda parir para sacar producto de ellos se ha desperdiciado enteramente el abono, y quienobra así se hace á sí mismo un perjuicio de consideración. Los vigueros de la vuelta de abajo en Cuba y todos los labradores saben también que arando la tierra cuando está plagada de yerbas bien verdes y ju- gosas adquiere buenas cualidades, y que tanto el tabaco como cual- quiera otra planta que allí se siembren dan mejores resultados. Se rompe la tierra con el arado águila americano que entierra al momento las yerbas, habas, frijoles, etc., ó demás plantas sembra- das á propósito, y una sola labor basta con tal instrumento para ta- par bien todo lo verde que habia en el terreno. También se sacan los mejores resultados del modo de abonar, que consiste en enterrar al pié de las plantas cultivadas sus propios despojos estando verdes, lo que no es otra cosa sino la primera práctica, y surte mejor efecto, como está probado en Europa para los viñedos, y en las Antillas se la ha de aprovechar para el cultivo de la caña de azúcar. El malojo de maíz es un abono verde superior, cuya descomposición se efectúa pronto y en menos de un mes: se ha de cortar y de enterrarle cuan- do va á soltar la espiga: las pencas de Maguey constituyen también un buen abono, el malojo de mijo, el añil, los frijoles verdes, etc.; pero las plantas de la familia de las leguminosas son tenidas por los A 432 APÉNDICE 2". agrónomos como las que suministran mejores resultados; por consi- guiente cuando será posible habrá que darlas la preferencia, j espe- cialmente al añil, porque se cria en cualquier suelo j que es además natural de las Antillas. El abono con plantas verdes se puede ejecutar de varios modos : u se le siembra en el terreno mismo que deben fertilizar, ü otras ve- ces se le tiene sembrado fuera de él, pero lo mas pronto posible, lo que se hará cuando el suelo que ha de ser abonado estará tan esquil- mado que no produzca la planta verde con que se debe vigorizarle. En ese último caso, antes que la maloja, el añil, etc., se hayan de cortar ó de arrancar, preciso será preparar el terreno desvirtuado con tres ó cuatro labores ejecutadas con el arado, lo mas profundo posible: en efecto, como lo dice tan juiciosamente el agrónomo inglés Leonardo Wray, cada labor que se da al suelo con el arado es una mano de abono atmosférico que recibe : así preparada la tierra, se abre un surco con el arado en un lado y en la misma orilla, se trae el abono verde cortado al mismo tiempo, se llena el surco y al abrir el segundo está cubierto de la tierra ¡¿unciente y se sigue así hasta que todo el campo esté abonado : se dice que el terreno que tiene muchas malvas, malvaviscos, cadillos todavía herbáceos y no vuel- tos leñosos, queda bien abonado arándolo y enterrándolas allí mis- mo : se pudren pronto. Cuando el malojo ó el añil se destinan para abonar el suelo en que se han criado, es preciso sembrarles en líneas rectas con la mano ó mejor y mas económicamente con la carretilla sembradora, separa- das una y otra por un espacio ó calle de media vara y 2 ó 3 pulga- das de intervalo de una mata á otra sobre la línea y cuando ya está en el estado conveniente se abre un surco retirado como de unas 9 á 12 pulgadas de la primera línea y de la parte de afuera del plantío y á lo largo de ella, tendrá tal surco como 8 á 12 pulgadas de pro- fundidad y lo menos 14 de ancho en la parte de arriba : detrás del arado que le va abriendo siguen uno ó dos hombres cortando ó ar- rancando la maloja ó el añil de la primera línea y poniéndola ten- dida á lo largo del surco que después se llena con la de la primera línea, abriendo otro surco igual que se llenará con la de la segunda línea, mientras el de la primera se encuentra cubierto con la tierra del segundo surco que le arrójala vertedera y se continúa así hasta haber concluido la tarea. Las malas yerbas que no se pueden em- plear para abonos verdes por una causa ó por otra, se pueden sin embargo aprovechar por abono compuesto muy bueno, del modo señalado mas arriba al hablar de los abonos artiíiciales ó solamente disponiéndolas por capas con cal viva y tierra por encima. El mes de agosto es en las Antillas el primer mes del año agrícola y en Cuba los labradores le llaman el mes de los locos , porque es la época en que efectúan los arrendamientos de predios rurales. En agosto pues se preparan las tierras para las siembras de invierno, limpian el terreno, queman las maniguas y aran, pero sin pensar en ningún modo en abonarlas, porque en general son bastante ricas todavía, mas algún dia tal descuido se ha de pagar carísimo. Después de la operación de limpiar el terreno y de quemarle en GE>ÍERAL1DADES. 433 la forma que tenemos esplicada mas arriba, porque es sin contesta- ción ninguna la mejor, se han de traer los abonos ó compuestos fer- tilizantes convenientes al suelo que se trata de disponer ^''d la clase de planta que hay que sembrar en él y de distribuirles con igualdad sobre el terreno : bastan por lo regular de 5 á 6 libras de tales abo- nos, cuya preparación tenemos enseñada algo mas arriba, páj. 429, por cada vara cuadrada, y hasta menos en muchos casos. La primera labor se ejecuta con el arado sin vertederas ó con el'as; consiste en romper solamente el suelo y se ha de practicar á medida que se van estendiendo los abonos que se deben siempre en- terrar el dia mismo que han sido repartidos, porque secarse á la su- perficie del terreno les hace sufrir mucho perjuicio ; los surcos de- ben estar muy unidos y la reja cortante del arado habrá de penetrar en la tierra solo de 3 á 4 pulgadas. La segunda labor se llama cruzar : consiste en cortar, con el mis- mo arado con vertedera la primera en cruz; los surcos han de estar unidos }' la reja profundizará de 6 á 8 pulgadas, según sea mas ó menos compacta la tierra, que volteada sobre el abono impide mas su disecación y principia ya á mezclarle con él suelo. Después de como 8 dias de suspensión del trabajo se da la tercer labor ó segundo cruzado, que consiste en cortar en cruz con el arado provisto de su vertedera la segunda labor; unidos los surcos y de 12 hasta 14 pulgadas de profundidad. Con la cuarta labor ó tercer cru- zado se corta en cruz la tercera, entonces el arado con su vertedera puede profundizar tanto cuanto es posible y hasta atacar el sub- suelo en ciertos sitios, porque es siempre útil que un poco de él se mezcle con el terreno, para que la parte escrementicia de las raices de las plantas anteriores, sufriendo la acción de los aj entes físicos y químicos del aire se vuelva abono : véase en el discurso prelimi- nar lo que tenemos dicho al hablar de las raices; además de eso la tierra vejetal y los abonos descienden siempre y se depositan en los surcos practicados en el sub-suelo, en que las raices que mas profundizan les encuentran para nutrirse; por ese motivo usan los agrónomos ingleses, alemanes y franceses el arado de sub-suelo, que es casi como el cubano, muy abierto y sin orejas. La grada se pasa por lo regular después de la cuarta labor : sus dientes de hierro penetrando en Jas tierras como unas 9 pulgadas, desbaratan los terrones, desmenuzan bien la tierra é incorporan bien los aleónos; no es otra cosa sino el rastrillo do los jardineros puesto en mayor escala. Seria muy bueno emplearla también des- pués de cada una de las dos labores primeras, porque estirpa y re- coje las raices de las plantas perjudiciales, que basta amontonar y quemar allí mismo, lo que es mucho mas provechoso que arrojarlas afuera, como se suele hacer y lo que empobrece algún tanto el suelo de donde salen. Como lo tenemos ya pronunciado en nuestro discurso prelimi- Pxar, sin agua ó humedad en cantidarl suficiente no hay vejeta- cion posible y será tanto mas lozana cuanta mas humedad le acom- pañe, con un calor suficiente y sostenido, lo que es la condición de los paises intertropicales y equatoriales, pero por desgracia el agua TOMO n 28 434 A.PÉNDICE 2°. Bo está uniformemente repartida en ellos ; en efecto, la parte norte de las Antillas está favorecida de un número crecido de rios, de ar- ro3'os y de cursos de agua, en relación ordinariamente con su es- tensión territorial, mientras en su parte meridional escasean los cursos de agua ó son muy poco caudalosos y padece por consi- guiente sequía, á veces horrorosa, unos meses seguidos, durante los cuales, la tierra, como esterilizada, no produce nada; de tal manera que las cosechas perecen por falta de humedad, y que los animales, es decir, los ganados, no solo van enflaqueciendo poco á poco y el azote llega hasta tal grado de intensidad, que se les ve morir de hambre y de sed á la vez. Entonces los campesinos arruinados se lamentan de tal calamidad, .j sin embargo, después de pasada la tormenta, muy pocos hacen lo necesario para evitarlo en lo sucesivo y casi ninguno se ocupa de establecer en sus posesiones un buen sis- tema de irrigación, alimentado sea por rios ó lagos naturales, sea por medio de pozos, aljibes ó de lagos artificiales, sacando el agua del suelo por medio de las máquinas á propósito ó teniendo guar- dadas en depósitos, dispuestos como conviene, las abundantes aguas de las lluvias que se desperdician ó causan perjuicios, ó porque vie- nen en tiempo inoportuno ó porque en un tiempo dado son en de- masiada cantidad, y en fin, porque están muy mal repartidas : en efecto, pocas comarcas hay en donde no caiga en el discurso del año una cantidad de agua suficiente para remediar las necesidades de los vejetales que es capaz de criar. Pero, engolfarnos en la des- cripción de los tan variados y tan numerosos aparatos y trabajos hidráulicos publicados sobre el particular nos llevarla demasiado lejos de nuestro objeto ; por tal razón nos limitaremos á aconsejar se proporcionen las obras que traten de la materia, y cualquier gasto que se haga relativamente con la importancia y con la estension de las fincas, si con él se consigue suficiente agua distribuida como corresponde, les pagará en el céntuplo lo gastado. El agrónomo Vray dice que el riego de los cañaverales es asunto de suma importancia para los hacendados: pero siento decir que este es uno de los que la generalidad desconoce ; sin embargo, lo hemos visto aplicado con mayor provecho en la isla de Puerto-Rico, especialmente en el partido de Ponce. La necesidad del riego se nota en efecto mucho mas en un pais tropical que en otro cuyo clima sea templado y húmedo, como Inglaterra, verbigracia, en donde sin embargo es indispensable para los jardines, pastos, etc. ¿Cuánto mas urjente no será pues ejecutarlo en un clima donde ocurre á ve- ces que desaparece easi toda la caña del campo á causa de la sequía y de la quemante acción de los abrasadores rayos del sol? Lo que el agrónomo inglés dice de la caña de azúcar debe aplicarse á todas las siembras y hasta á los pastos, cuando la disposición del terreno la permite. Es espectáculo bien triste el ver á los hacendados y labradores, cuando contemplan el mal estado de su plantación, el estado mise- rable de sus ganados, por causa de una sequía prolongada que siem- pre acarrea una pérdida que no baja de los dos quintos de la cose- cha. No pocas veces causa una disminución de mas de la mitad, y GENERALIDADES. 435 otras veces llega hasta aniquilarla casi enteramente, como lo hemos presenciado demasiadas veces en Guayama de Puerto-Rico, en don- de haj sin embargo riego posible, mientras que en otros partidos de la misma isla hemos visto riegos bastante regulares, pero casi siem- pre insuficientes, porque se ha limitado siempre á aprovechar los solos cursos de agua naturales, por desgracia poco caudalosos, sin pensar en utilizar la estación de las lluvias para conducir la que se desperdicia en lagos artificiales, comunes á algunos vecinos que habrian concurrido á su formación y que tendrían en tales depósi- tos una riqueza guardada para suplir á los rios cuando son insufi- cientes, j de este modo tendrian siempre cosecha segura. Sabido es que el agua facilita muchísimo la transformación de las materias es- crementicias de las raices en humus ó en sustancias abonantes; re- gar en estación seca j caliente trae en pos de sí otro efecto que influye materialmente mucho en las plantas : en efecto, el vapor tibio que levanta el sol de las tierras regadas, cuando sube pasa por dentro del follaje, buscando para irse al aire, pero al pasar así es- chupado poderosamente por las hojas y demás partes verdes de las plantas y las hace muchísimo favor. Cualquiera agua, por pura y clara que sea, podemos siempre sa- turarla artificialmente con todos los principios fertilizantes que traen consigo las mejores aguas de los rios ; para esto conviene ha- cerla pasar por un estanque apropiado antes de esparcirla sobre el suelo que se intenta regar; en tal estanque se habrá de poner cal cáustica, cenizas ó potasa, estiércol, etc., y penetrando por esas sustancias disuelve las solubles y se las lleva consigo al suelo en el cual penetra, volviéndose así abono líquido, que como todos lo saben es el mejor de todos. Ahora que tenemos estendidas las consideraciones generales sobre los terrenos, las propiedades físicas y químicas de las tierras ara- bles, sobre el modo de apreciarlas para el cultivo, sobre los abonos, las irrigaciones, etc., aplicaremos esos datos al cultivo de los veje- tales que se cultivan ordinariamente en las Antillas, á fin de que la aplicación, estando al lado de la teoría, haga nuestro trabajo mas provechoso para nuestros suscritores. Principiaremos por los cerea- les que se cultivan en las Antillas, es decir, por el arroz y el maíz, y seguiremos por la caña de azúcar, etc., y demás vejetales cuUi va- dos en mayor escala ó que podrían serlo con ventaja. Las cereales, perteneciendo todas á la gran familia do las Gramí- neas, necesitan un terreno bien labrado y bien abonado, porque para que su grano contenga mayor proporción de gluten ó de sustancia azoada que le reemplaza, teniendo en la alimentación humana igual ó semejante papel, es preciso que el terreno contenga, sea natural- mente, sea por medio de los abonos, muchos productos nitrojenados y también fosfatos calcáreos, y se debe ordinariamente alternar su cultivo con otros vejetales que permitan al suelo descansar y le restituyan con los abonos 6 x^or medio de sus escreciones lo que ha perdido; sin esa precaución indispensable el terreno no tarda en esquilmarse y entonces, no produce sino cosechas raquíticas y ape- nas productivas. 436 APÉNDICE 2^. Arroz, M. D. — G. 223. — Al arroz convienen los terrenos húme- dos ó que se pueden regar con facilidad, y su cultivo es muy prove- choso, porque no esquilma el suelo y no necesita ningún abono ó muy poco : todos los terrenos convienen al cultivo de ese precioso vejetal, en la intelijencia que se le podrá regar cuando lo necesita- rá: en efecto, sabido es que no se puede desarrollar bien y como conviene sino en el agua ó en los terrenos muy húmedos ; será siempre muy ventajoso meter los sacos que contienen la semilla en agua durante unas 8 ó 10 horas antes de entregarla á la tierra, es- pecialmente si el suelo no está muy húmedo. Dos ó tres dias des- pués de sembrado, si el terreno está cubierto de una capa lijera de agua, lo que es la condición mas favorable, se han de abrir las zan- jas á fin de que el agua pueda escurrirse enteramente, para que go- zando el calor del sol tenga lugar su pronta germinación y que su desarrollo se haga del modo mas favorable: prosperará muy bien con irrigaciones periódicas hechas de manera que el terreno se que- de solamente algunos dias seco cada vez; de ese modo la cosecha será mas segura y abundante siempre : es preciso desyerbarlo á lo menos dos ó tres veces, porque las malas yerbas son para él un ene- migo terrible; por tal razón se deberá preparar el suelo con mucho mas cuidado que lo que se suele hacer ordinariamente, á fin de lim- piarle perfectamente con la grada de las yerbas, raices, y desmenu- zar bien la tierra ; después de amontonadas y quemadas, como lo tenemos dicho mas arriba, se esparcen las cenizas como abono sobre el terreno. Le hemos visto con mucha frecuencia reemplazar al ta- baco en las vegas de Puerto-Rico, sin que los labradores preparasen el terreno como conviene y sin pensar nunca en regarle, y sin em- bargo, daba cosechas muy buenas por causa de la estación de las lluvias. Cuando por casualidad se encuentra sembrado en terrenos á proposito, es decir, húmedos como corresponde, la misma tala puede dar dos y hasta tres cosechas de seguida, como lo hemos pre- senciado algunas veces; se necesitarla solamente desyerbarla después de cojido el arroz y entonces retoñarla la planta con muchísimo vi- gor y pariría otra cosecha muy regular ; en ese caso es preciso cor- tar la paja á un pié del suelo ó algo menos : raras veces toman tal trabajo y los retoños se destinan para pasto. En Puerto-Rico las mas veces se siembra el arroz en los desmontes, sin reparar en la proximidad del agua, solamente se escoje para entregarle en el sue- lo; que bien que vírjen, con frecuencia, ó casi así, no está casi nunca preparado como conviene, al principio de la estación de las lluvias, y sin embargo, produce bastante, sobre todo si las aguas son abun- dantes, mientras que en el caso contrario no se saca casi nada ó muy poca cosa, pues que no se ha tomado nunca ninguna disposición para regarle. Para obviar tanto cuanto es posible tal estado de cosas, se debería escojer la variedad de arroz llamada arroz de montaña, seco ó de Cochinchina, porque no necesitando de irrigaciones, se cultiva con mucha ventaja en tales lugares, y es casi la misma variedad cultivada en la Carolina del Sud: es el oriza nepalensis ó muHca de Boxburg. Se cultiva el arroz regado en las tierras de labor, como se hace DEL ARROZ. 437 para el trigo en Europa, ó plantado en los bosques recién derribados Y muy feraces por naturaleza, lo que se practica como sigue : pre- parado el terreno se ahila y sub raya á distancia de una vara de calle, sembrándolo por la sub-raya con el plantador, á tres cuartas de distancia, y poniendo solamente de 5 á 6 granos en cada hoyo, por- que cuanto mas desahogado esté el arroz, tanto mas encepa y carga. Se ahila y sub-raya el terreno de la manera siguiente : se tienden dos cuerdas paralelas afirmadas en los estremos por dos estacas dis- tantes tres cuartas de vara una de otra y en la misma dirección ; dos trabajadores, cada uno por su cuerda, de vuelta encontrada, de manera que terminen á un tiempo á los estremos opuestos, irán ras- pando el suelo sub-rayándolo á la anchura de la azada, mudando las cuerdas y continuando así la sub-raya hasta su término ; en seguida se practicará la siembra, hoyando lijeramente por la sub-raya con una púa de palo á tres cuartas de distancia, poniendo en cada ho- yito 4 ó 6 granos, que se cubrirán de tierra cuidadosamente. Para que esta operación sea mas pronta, conviene que detrás del hozador vaya un niño poniendo y cubriendo la semilla; tal procedimiento tiene dos ventajas: se aprovecha mejor el terreno por la rectitud de las hileras y se economiza un desyerbo ó se hace menos pre- mioso. A cada tres calles de arroz y después de habérsele dado el primer desyerbo, como á Ips 15 dias puede ponerse una de maiz para apro- vechar el terreno, dándole la distancia de dos varas y á 3 granos en cada hoyo. Antes de brotar el arroz la espiga, lo que se dice que está cogollando, es muy necesario desyerbarlo para darle ventila- ción y desahogo. La cosecha viene á los cuatro meses, regularmente por agosto ó principios de setiembre, y se verifica cortando las espi- gas sin caña para tener menos que cargar y aprovechar mejor la paja para forraje, que así fresca la comen muy bien las bestias. Las espigas recojidas en un dia se amontonan en un cuarto y se dejan en pila todo el dia siguiente para que acaben de madurar los que es- tán bien en sazón, lo que manifiestan en el color amarillo que toman todas igualmente; al tercer dia se ponen al sol, esparcidas por el patio, se recojen por la tarde, y se continua el asoleo hasta que se haya disipado toda la humedad para almacenarlas y desgranarlas después que se haya reunido toda la cosecha. Se desgrana el arroz con el azote llamado vulgarmente mandador, y luego que está bien molida la paja con las varas ó el azote se renueva el montón y se va recojiendo la vasura por encima hasta donde se pueda sin arrastrar los granos; el residuo se ventea para guardar el arroz en conchas, después es menester volverlo á asolear para pilarlo y limpiarlo de la concha. Para esta operación hay máquinas, pero la costumbre del país á falta de aquellas es pilarlo con algunas hojas de mais desme- nuzadas que contribuyen con su roce á separar el grano de su cu- bierta, soplándolo después en bateas. El arroz que se destina para semilla se guarda en concha y debe preferirse al que se desprende espontáneamente de la espiga, ya sea el que queda en la troje ó en el patio cuando se seca al sol, ó ya el que cae sacudiendo las panojas secas, porque este es el mas en sa- 438 - APÉNDICE 2''. zon. Cuando el arroz se siembra regado en las tierras labradas, se ha de dividir el terreno en cuadros y cada cuadro se debe rodear de un pequeño dique ó calzada con la misma tierra, de como una tercia de alto j dos de ancho, y es necesario que tenga bastante fuerza para detener el agua y resistir el regador que debe pasar con fre- cuencia por encima. Estos cuadros deben regarse de manera que el agua entre en ellos dormida y se estanque sin estra^iarse por grieta alguna. En los terrenos nuevos en que se ha derribado un bosque espeso, los terrenos y despojos que no ha consumido bien el fuego hacen la siembra algo mas difícil, y en este caso se planta al ojo po- niendo por delante miras ó guias en línea recta que sirvan de ausi- lio al sembrador para guardar en lo posible el mismo orden en los piquetes, porque no se puede sub-ra^^ar. Aun almud de tierra sembrada de arroz y maiz, como queda di- cho, le corresponde de semillas \\i de almud del primero y 1|2 al- mud del segundo, y regularmente produce 30 fanegas de arroz en cosecha, que se quedan reducidas & 15 después de limpio y 6 de maiz. Cosechados esos frutos de invierno se siembra de nortes el mismo terreno, de maiz y guaracaros ó frijoles y producirá en esta segun- da siembra 8 fanegas de maiz y 5 de frijoles, etz. El arroz limpio es muy propenso á picarse, pero con su concha y resguardado del aire se conserva bastante tiempo. En el campo se acostumbra á conservarlo en zurrones formados con el cuero de una ves ; el mejor método para conservarle mucho tiempo seria en silos, de que hablaremos en el párrafo siguiente, al tratar del maiz. Maiz. M D. — G. Iw2. — Según el señor La Rosa, lo que han considerado los botánicos como especies no son mas que variedades conocidas en América bajo los nombres siguientes : maiz de espiga ramosa, la cual no es otra cosa que el maiz común sembrado en ter- renos muy ricos y de vejetacion exuberante : lo hemos observado al- gunas veces. El maiz blanco, que rinde mucha harina, de sabor dulce, es preferido para fabricar la chica ó cerveza de maiz y tam- bién para arepas. — Maiz flor de harina es una variedad del maiz blanco, de grano grueso y hendido por el medio, muy semejante al maiz fofo. — Maiz manchado ó chinesco , llamado vulgarmente pinto, cuyo grano varia de color, aunque provenga de granos rojos, amarillos ó blancos, y casi nunca es todo de un color, á veces es azulado. — Maiz piedra de fusil, variedad que da mazorcas de ocho filas de granos blancos ó amarillos, ordinariamente amarillos, duros, transparentes y brillantes como el pedernal de donde ha tomado su nombre. — Maiz amarillo grande y pequeño que forma dos varieda- des que se cultivan en el medio dia; el pequeño requiere mejores terrenos, .«e da en tallos mas bajos y pesa mas que el grande. — Maiz de gallinas ó de palomas, variedad muy precoz de granos pe- queñitos muy á propósito para la cria de las aves domésticas. — Maiz tremes, el cuarentcno de España ; se cosecha de secano en mayor cantidad que las demás variedades. — Maiz tardío ó maiz de riego, que es la variedad mas fecunda y mas vigorosa y la mas general- mente cultivada. DEL maíz. 439 En la familia de las cereales ese vejetal es sin contestación el mas provechoso y de mayor producto en el suelo americano, porque es el mas á propósito para sacar de una superficie limitada de terreno una cosecha abundante j que además es orijinario del nuevo mundo, ya que Cristóbal Colon lo encontró cultivado, ya en Cuba y demás lugares de América. En Jamaica, donde es cultivado en escala ma- yor, produce con frecuencia dos y hasta tres cosechas al año, porque se puede sembrar en cualquiera estación, en la intelijenciaque debe haber llovido bastante antes de entregar las semillas á la tierra. Las cenizas de ese vejetal son muy ricas en álcalis, en efecto con- tienen *71,00 de potasa y de sosa; 6,50 de cal y de magnesia; 18,00 de sílice y ácidos fosfórico, sulfúrico y unos orgánicos en combina- ción con esas bases ; por esta razón se ve que el maiz necesita un terreno bastante rico, bien abonado y bien preparado. Prospera en las tierras fuertes y también en las livianas : tal cultivo necesita pues abonos ricos en sales alcalinas y calizas ó terrosas. Se juzga que para una cosecha que produzca 100 kilogramos de paja y semi- lla es preciso emplear 333 kilogramos de abono. En el Piamonte se emplean todos los 4 años 24,343 hilógramos de estiércol para cada hectárea, y sin embargo en las Antillas no hemos visto nunca abo- nar el terreno que se le tiene destinado, lo que á nuestro parecer es la causa de que bastantes veces da cosechas medianas, eso se reme- diaría con mayor facilidad preparando el terreno con el número ne- cesario de labores, quemando todas las yerbas raices después de re- cojidas, amontonadas y secas com.o conviene, juntándole las mas posibles sustancias vejetales desperdiciadas y tan abundantes ordi- nariamente en el campo, y después de eso esparciendo sobre el ter- reno estas cenizas mezcladas con la tierra torreficada correspon- diente y pasar la grada para mezclar ese abono con el suelo, mejor seria todavía, en los terrenos ya cansados de producirle, emplear los abonos verdes del modo que tenemos enseñado mas arriba, pa- jina Sabido es que se ha de sembrar ese vejetal en líneas rectas dis- tantes las unas de las otras como de una vara y media y los hoyos á como una vara los unos de los otros y algunas veces mayor inter- valo, según la clase sembrada y la riqueza del terreno. Cuerudo está echando su quinta hoja y que tenga como un palmo de alto, es pre- ciso des3'erbarle y binarle. Se arrancarán con cuidado entonces los pies demasiado cercanos de los demás, y se remediarán los vacíos sembrando en ellos una variedad mas tempranera. Ese primero desverbo se ha de hacer con mucho cuidado, á fin de no dañar las nacientes plantas y donde la azada no pueda correr sin ese peligro debe aplicarse la mano á la nueva cepa antes de apocarla, con deli- cadeza, de manera que no quede enteramente cubierta, eso se re- duce á un pequeño aumento de gastos, pero da una recompensa ma3^or. Como unos 15 ó 20 dias después de esta operación se ha de aporcarle; cuando las matas tendrán como una vara de alto se de- berá volver á desj'erbar, amurillar y á aporcar las cepas ; en la época de su floración se deben quitar los retoños que suelen salir de sus nudos inferiores y hacer entonces el último desyerbo que es 440 APÉNDICE 2°. muy importante y no se debe descuidar : entonces se hace el desho- jeo ó separación de los pies raquíticos que no prometen fruto. Des- pués de echadas las espigas ó mazorcas y de verificada la fecunda- ción, lo que se conoce por estar marchita la especie de barba ó pelo blanco que sale de ellas, se suele cortar la parte superior ó las fle- chas que se aprovechan para los animales que las comen con gusto y para los cuales constituye un buen forraje. En Jamaica se suele sembrar el maiz en las lomitas que se hacen en los cañaverales al sembrar la caña de azúcar, v también lo hemos visto hacer en las demás Antillas; poro, á nuestro corto parecer, tal asociación no es muy buena, porque ese vejetal saca del suelo los mismos elementos que la caña de azúcar y no se debe hacer mas que en los terrenos muv ricos ó bien abonados ; con frecuencia se siembra también junto con los muñiatos ó batatas, con las calabazas, con los frijoles, etc., y sale muy bien, pero en tales casos no se le debe considerar sino como cultivo secundario, que sin embargo da bastante utilidad. Cuando se quiere el maiz como maloja se le ha de sembrar en mayo ó en junio, que es el principio de la estación de las lluvias, y se llama entonces siembra de agua, mientras la otra, que se hace en octubre ó en noviembre, cuando están principiando los chubascos de los nortes, se dice siembra de frió ; á los cuarenta dias, si el tiempo ha sido favorable y que haya llovido bastante, está 3^a la maloja bastante crecida y dispuesta á brotar la espiga, y se encuentra buena para servir como abono verde y para enterrar en el suelo, como lo tenemos ya dicho mas arriba, páj.431; ha debido sem- brarse en ese caso en líneas rectas separadas una de la otra por un espacio ó calle de media vara y dos ó tres pulgadas de una mata á otra ; es también muy buena para forraje y paga bastante cuando las fincas son vecinas de las ciudades en donde se le vende con ma- yor facilidad para los caballos. Ninguna de las plantas que forman los prados artificiales ó naturales contiene tantos principios ali- menticios ni gusta tanto á los animales de toda clase, como el ma- lojo ó maiz verde ; es el alimento mas sano y mas sustancioso que se les puede dar, lo prefieren á todos los otros y seco y rociado con agua algo salada, bien picado tanto el malojo como las hojas secas de las mazorcas, y las mismas puntas de la mata, cuando no hay malojo fresco, constituyen un escelente forraje para el ganado ; las vacas le comen muy bien así y dan muy buena leche, engordan los bueyes con esos despojos. El cultivo del malojo se reduce á sembrar el maiz muy unido casi como en almacigo, para que no se desarrolle demasiado y sean mas tiernas y mas dulces las cañas ; pero no se ha de cortar antes de estar bien espigado, porque demasiado tierno serviría de purgante en vez de alimento ; la siembra se hace á una tercia de distancia y de 6 á 8 granos en cada hoyo ; los terrenos algo húmedos ó que se pueden regar con facilidad son muy á propó- sito para ese cultivo. Para obtener buenos resultados es indispensable escojer la semi- lla y para eso las mazorcas mas gruesas y que contengan los granos mas grandes saliendo délos lugares mas asoleados y bien sazonadas son las mas á propósito; deben guardarse por separado en un lugar DEL maíz. 441 seco y colgadas de dos en dos, atadas con sus mismas hojas. Se habrá de dar la preferencia á las de última cosecha y cuando se vayan á desgranar para sembrar se desecharán los granos de las puntas, to- mando solamente los de la parte mediana de la mazorca. Conviene remojar el maiz por doce horas, aunque sea en agua sin sal, antes de sembrarlo, para separar los granos vanos que sobrenadan; pero es mejor hacer ese remojo con agua y sal, agua de estiércol ó de es(;re- mentos de vaca ó de caballo y un poco de ceniza y cal, lo que favo- rece mucho la germinación y la planta se desarrolla con mas vigor. El maiz que no echa mazorca ó no fructifica se debe cortar para mallojo, y conserva su dulce durante su vejetacion, mientras que el que fructifica lo pierde á medida que se va formando el grano. Des- pués de la fecundación, es decir cuando se habrá marchitado la pa- noja y que los estilos ó barba antes sedosos se habrán desecado y vuelto negruzcos y que el jilote se habrá separado un poco del tallo á que estaba casi pegado; entonces se acostumbra á despuntar las cañas para forraje y para acelerar la madurez del grano; se desca- beza el maiz cortando el tallo por la parte superior desde arriba de la hoja inmediata á la mazorca mas alta. Don Luis de la Rosa al hablar de ello dice : Parece que el despunte del maiz se debe hacer siempre que convenga acelerar la madurez del grano y también cuando hay escasez de forraje, de tal manera que el valor del que da la punta del maiz compense los gastos del despunte y la disminu- ción del grano y deje una utilidad considerable; se le omitirá cuan- do ese forraje no tendrá valor por la abundancia de posturas ó por la falta de consumo. El corte de los retoños cuando estos son estériles ó prometen muy pocas mazorcas, es muy útil en los terrenos medianos, pero en los fértiles solo se suprimirán las cañas que no hayan fructificado, pues en tales terrenos algunos retoños dan casi tantas mazorcas como la caña principal. Los jilotes abortivos también se deben quitar para que no se desperdicie la savia que han de aprovechar las buenas ma- zorcas. Es necesario tener mucho cuidado con quitar las malas yerbas arrancándolas de raiz cuando la tierra está húmeda y cortándolas cuando no pueden arrancarse; los labores de escardo no solo se dan para quitar las malas yerbas y proporcionar mayor cantidad de abono atmosférico, sino también para que sus articulaciones infe- riores echen nuevas raices, así es que por el número de nudos que hayan brotado raices se puede conocer el de los labores que se le han dado. Pueden sembrarse con él otras semillas intercaladas en las matas, como frijoles, habas, papas, etc., si las tierras son bas- tante fértiles. El maiz se siembra de regadio ó de secano, y esta última siembra se hace de tres modos distintos, á saber : de húmedo, de aventu- rero y de temporal, el grano que se elije para la de regadio es el de maiz tardío, el de húmedo es una variedad parecida al de riego, que se siembra al comenzar la primavera en los terrenos húmedos cons- tante y moderadamente; el dicho aventurero es una variedad del tardío, que también se siembra en la primavera en las tierras hu- 442 APÉNDICE 2**. medecidas por las lluvias de invierno ó por las que suelen caer en el verano; la siembra del temporal, que es una variedad del precoz, se hace en tiempo de aguas cuando el terreno está húmedo , ó en tierras secas, en cuyo caso la siembra se llama en polvo, si hay es- peranzas de que llueva. El maíz es una planta gastadora y muy exigente, por cuj^ moti- vo se hace preciso alternarla con otras que no le sean análogas, ó de familias diferentes, para no esquilmar las tierras que deben abo- narse con estiércol ó restos orgánicos bien podridos. Los suelos en que predomina la arena y la arcilla sobre la caliza teniendo cantidad de humus conveniente es la mejor para ese cultivo. Conviene siem- pre esperar, para comenzar la siembra de ese vejetal, á que la tierra haya adquirido cierto grado de calor y está en este estado á fines de abril ó principios de m.ayo, á lo menos que las aguas anticipen á principios de abril, que entonces será necesario sembrar inmedia- tamente, si el tiempo da muestras de continuar lloviendo. Cuando ya todo esté preparado y haya llegado el momento de sembrar, se irá hoyando en línea recta, si es posible por cuerda á distancia de una vara y dos pulgadas de profundidad, poniendo en cada hoyo tres ó cuatro granos solamente y cubriéndoles bien con tierra. Se acostumbra poner en cada hoyo, sin preparación alguna, 6 á *7 gra- nos por los vanos que no nacen y los que dañan las hormigas y los pájaros, teniendo después que deshijar las plantas que salen débi- les ; inconvenientes que se evitan en parte con la preparación de la semilla, como lo tenemos dicho mas arriba; por medio de las calles se pueden sembrar frijoles, guaracaros, yuca, para aprovechar el terreno sin perjuicio del maiz. Sembrado de esta manera caben en el almud de tierra ó media fanega (la fanega de tierra conteniendo 400 estadales ú once pies cuadrados y en las dehesas 500), "7,500 cepas de á 3 y 4 matas, cuyo producto probable en una tierra nueva sin accidente alguno seria el de dos mazorcas en cada mata ; lo hemos visto bastantes veces de cuatro, pero suponiendo por término medio cuatro mazorcas y media por cada cepa, tendríamos en el terreno dado un producto de 33,1150 mazorcas que, á 600 por fanega, son 55 fanegas ó 100 quintales'. Se siembra también el maiz "Taño á o-rano y á distancia de media vara por todos lados ; cabrían entonces en la misma área 40,000 ma- tas que á 1 y á 2 mazorcas darían un producto mucho mayor, aun- que entonces no podrían cultivarse otros frutos en los espacios ; pero en este caso la producción mayor recompensa su falta. Varios autores, como Lelieux y Gothard, son de parecer que no debe sem- brarse otra cosa en el maizal, porque las otras plantas, así como las malas yerbas, quitan al maiz la ventilación y una parte de su ali- mento; participamos nosotros de tal parecer. Las matas débiles que no van á producir ó /^ue dan mazorcas muy pequeñas deben quitarse con precaución, á fin de no lastimar las raices de las vecinas: eso es lo que se llama deshijar. La perfecta madurez del maiz se conoce por la aspereza y seque- dad de las hojas de la planta y de las que cubren las mazorcas, las cuales se entreabren, entonces es conveniente doblar las mazorcas, DE LA ALCANDIAo 443 si no se les puede cosechar inmediatamente. El maiz sembrado á principios de mayo estará maduro en setiembre y el de los nortes ó sembrado á principios de octubre lo será por febrero. Se han de co- jer las mazorcas por un tiempo seco, despojándolas de la mitad de las cubiertas, haciéndose pequeños montones, y cargándoles inme- diatamente á la casa. Reunida la cosecha, se separan las mazorcas averiadas, para el gasto, se asolean las buenas uno ó dos dias para guardarlas en la troje que se ha construido en la cocina para reci- bir el humo. Bien se guarda el maiz á media hoja, bien enteramente pelado, y la principal condición que ha de llevar el granero para su conservación, es que esté bien seco, porque con la humedad se ca- lienta y se pica muy pronto. Cuando sea necesario desgranar una cantidad considerable de maiz se habrán de emplear las máquinas á propósito y si no se las tiene se formará una troje á la altura de 3[4 de vara en forma de cajón y abierta por el frente; se echan en ella cuantas mazorcas quepan enteramente limpias de sus hojas y sobre ellas se descargan golpes con un palo de alguna consistencia y de dos varas de largo; á cada golpe va cayendo el maiz debajo de la troje, y se sigue así hasta que se queden las tusas sin grano, y los que no hayan quedado enteramente limpios se repasan á la mano á medida que se van arrojando fuera. Para una cantidad menor hay un procedimiento mas sencillo, que consiste en atar un cuero en forma cilindrica, echar dentro las mazorcas y pilarlas sacando las tusas que vayan quedan sin grano hasta concluir con todas. Pero así el pilado como el de la troje debe ventearse después para que quede aseado y en disposición de ir al mercado. Para guardar por mucho tiempo el maiz desgranado en grandes cantidades no hay otro medio seguro sino ponerle en silos herméticamente cerrados, en donde no solo se conserva por muchos años al abrigo de los in- sectos, ratas y humedad atmosférica, lo que principia á practicarse de nuevo en Francia para la conservación del trigo, y lo que se ha- bría de hacer también para el arroz y otros granos. Ese procedi- miento data de la mas remota antigüedad y se ha practicado en Es- paña, en Arjelia entre los árabes que siguen todavía con ese método, etc., y demás lugares. En los graneros comunes es conveniente y hasta indispensable la fumigacionesconhumo de leña solaósulfuro- sas, porque aseguran su conservación. Los mijos son cosechas tropicales ó intertropicales que en las In- dias Orientales ocupan el segundo rango, siendo el arroz el primer cereal de esos países ; en Ejipto se los tiene por el mas importante cereal, y en el África Occidental constituyen el principal alimento sacado de los cereales, se siembran en los mismos terrenos que el maiz y necesitan igual cultivo : véase lo que tenemos dicho de sus semillas en la parte médica de esta obra, núm. 181. líolcus saccharatus . M. D. — G. 259. — Este vejetal ha sido, pocos años hace, introducido en e:^tas Antillas de las Indias Orien- tales, de la China y de la Cochinchina, en donde se cultiva para sa- car azúcar de él, mas en las Antillas no se da tan dulce como en su propio país, de tal manera,- que no puede bajo ese concepto compe- tir-de ningún modo con la caña de azúcar; sin embargo, se le puede 444 APÉNDICE 2°. cultivar con bastante ventaja y utilidad para forraje, además sus semillas siendo muy buenas para las aves de corral y para los caba- llos, reemplazan perfectamente el maiz para ese objeto. El ter- reno que le corresponde mejor ha de ser seco y liviano ; se le pre- parará del mismo modo indicado para el cultivo del maiz y se sembrará de la misma manera también al principio de las lluvias y está ya madura á los tres meses de sembrado; después de cortado retoña con facilidad y da una segunda cosecha, y para que salga buena basta dar tierra ó aporcar las cepas y limpiar el suelo de las malas yerbas. Sorgo. — Sorghum vulgare.M. D. — G. 261 . — Bien que natural délas Indias orientales, aprovecha muy bien el clima y el terreno de las Antillas en donde se cultiva especialmente paraalimentar y hasta cebar las aves de corral, v en ciertos lugares de Jamaica se cultiva en escala regular. Necesita del mismo terreno y de igual cultivo que el precedente, pero se ha de sembrarle especialmente entre setiem- bre y noviembre, está maduro entonces en enero y después de cor- tado retoña y cuidado como lo tenemos dicho para el Holciis sacclia- rinus, produce una segunda cosecha muy buena. El señor C. Bravo le sembró r.egado para cosecharle verde y produjo una gran cantidad de forraje magnífico, muy nutritivo y muy apreciado de los bueyes y vacas que se le comian golosamente ; hizo la siembra en un suelo muy pobre, sin ningún abono y que antes de arado no producía otra cosa sino yerbas malas: según este señor es muy bueno para abono verde y vuelve el suelo feraz. Preparado el terreno se ahila y sub-raya como para el arroz, á distancia de tres cuartos de vara y se echa en cada hoyito media pulgada de semilla, que se cubre de tierra cuidadosamente ; de este modo se aprovecha mejor el terreno por la rectitud de las hileras y se economiza un desyerbo ó se hace menos premioso. Así sembrado, no se desarrolla tanto el vejetal y la panoja no se tuerce con el peso de la semilla, y se queda por consiguiente mucho mejor para la fa- bricación de las escobas, que es su mayor producto. Luego que la semilla está sazonada, que es á los tres meses, poco mas ó menos, se cortan las panojas con un palmo de la caña, dejando la planta en pié. porque después de esta cosecha brotan nuevas espigas por las articulaciones ó nudos de la caña, saliendo de la axila de las hojas, un poco mas pequeñas, pero que también dan semilla y se utilizan en la fabricación de las escobas. Recojidas las panojas se ponen al sol dos ó tres dias seguidos, hasta que se emblanquece el tallo ver- de : luego se estrae la semilla de manera que no se maltrate la pa- noja que ha de servir para hacer escobas : para eso se las tiende en una mesa ó en una tabla y se les pasa el lomo de un cuchillo repeti- das veces, volteando la espiga hasta que se quede limpia. Para que la semilla se conserve mas tiempo y esté mejor preparada para los usos domésticos, conviene limpiarla de la basura que arrastra con- sigo al separarla de la espiga : para eso se pila y se ventea ; pero no se pulirá la que se destine para sembrar. El sorgo, como el trigo, merece guardarse en granero ó silos con esmero, como una reserva de pan. DEL SORGO Ó alcandía. 445 Las escobas, que dan mucha utilidad, se fabrican del modo si- guiente : la primera operación será acopiar los palos de un grueso proporcionado, lisos y derechos, de vara y media de largo, quitán- doles la corteza y dejándoles secar á la sombra 15 dias antes de em- plearlos, por lo menos, para que la escoba no se afloje después de hecha, lo que sucedería si se fabricase con el palo vei-de; después se le atraviesa una estaca de dos pulgadas, mas abajo del estremo mas grueso, que sobresalga un dedo por cada lado, ó se le ponen dos pe- queños clavos que hagan igual efecto. Preparados así los palos se escoje la espiga mas sana y de mejor figura para la cubierta ó capa y de lo restante se hacen los manojos para la armadura interior ó tripa. A la espiga de capa se le da un corte en la caña y á la raiz de la espiga, semejante al tajo de una pluma de escribir y que termine á tres pulgadas de largo, sacándole el corazón: los manojos para tripa serán mas ó menos gruesos, según el tamaño que se quiera dar á la escoba, pero lo regular es darle solamente seis pulgadas de circunferencia. Un poco antes de fabricarlas se mojarán las cañas, tanto de la tripa como de la capa, para que no revienten al amar- rarlas; preparado así el material se fija una cuerda en una de las puntas salientes de la estaca ó clavo y con ella se atan fuertemente dos manojos, uno frente á otro, pasando la cuerda ya en contorno, ya entre el palo y el manojo, para que quede bien firme : las cañas sobrantes de la amarra se cortan contra el palo una línea mas abajo, y con la misma cuerda se irán sugetando las espigas de capa, procu- rando que cada espiga que se va colocando pise el corte de pluma de la caña de la siguiente, á la que se dobla el corte del otro lado para que queden bien unidas y bien cubierta la amarra, y después de darles dos ó tres vueltas con la cuerda, se van enrejando si se quiere llevar la obra hasta la perfección, pisando unos cabos y levantando otros, en la estension de una pulgada, terminando con dos ó tres vueltas de cuerda, rematando con un clavo pequeño que pise y ase- gure el término de la cuerda : concluida esta operación restan las costuras con que se recojo la espiga, la una como cuatro ó cinco de- dos mas arriba de donde empezó á amarrarse la cubierta y la se- gunda dos ó tres dedos mas alto. Para que la escoba quede mas asentada y dé mejor figura conviene ponerla en prensa : al dar las costuras se van asentando las cañas de las espigas suavemente con un mazo : otras veces se hacen las escobas mas sencillamente, atan- do toda la espiga al palo en un solo manojo sin escojer, dándole des- pués las costuras. En un cuadro de tierra de cien varas ó diez mil varas cuadradas, que es una fanega, á las distancias dadas de tres cuartos de calle y media vara por la hilera, caben 25,000 cepas : si consideramos que cada cepa contiene dos ó tres plantas solamente y que cada una con sus correspondientes retoños da 4 ó 5 espigas, no será exaj erado el cálculo de 10 espigas por cepa, que son 250,000 espigas, y empleán- dose en cada escoba '70 espigas, poco mas ó menos, son 3,507 esco- bas finas; al precio medio de dos reales una, hacen la suma de 876, 75 pesos. Cada escoba ha dejado 4 libras de semilla ó 148 quin- tales á 10 reales uno ó 175 pesos, montando las dos partidas á 1,05] 446 APÉNDICE 2°. 75 pesos; siendo los gastos de 284, 53 pesos, quedan 767, 22 pesos de utilidad. Si á este producto neto se agrega el trabajo personal que debe hacer una familia de campo, es indudable que un solo ta- blón de cien varas asegura su subsistencia, sin que esta empresa le impida cultivar el maiz y los demás frutos anexos al estableci- miento. Aunque las aves domésticas comen el grano, no es con tanto apetito como el que tienen por el maiz, j para que las bestias le co- man bien se le mezcla con un poco de agua y sal. Al principio les repugna un poco, pero no tardan en acostumbrarse á esa comida que les es de mas provecho q'ie el maíz, porque es mas sana. Coix lacryma. — Lágrima de Job. — Aunque este vejetal sea natural de las Indias Orientales, se cria con la mayor facilidad en las Antillas, en donde lo hemos visto perfectamente bien aclimatado, y está pariendo todo el año y por consiguiente muchísimo, y le he- mos hallado casi silvestre en muchos sitios de la isla de la Trinidad, en donde sus semillas sirven únicamente para hacer collares, mien- tras que en las Indias Orientales se utilizan por alimento. Aconse- jamos pues su cultivo en las Antillas, sea por sus semillas, que se pueden dar á los caballos ó á las aves domésticas para reemplazar el maiz; pero como es durísima cuando madura, será preciso antes ablandarla poniéndola por algún tiempo en agua, sea fria ó mejor caliente. Será muy útil como forraje, que los animales apetecen muchísi- mo : como retoña con mayor facilidad, se le podrá cortar algunas veces seguidas, con el cuidado cada vez de dar tierra á la cepa, y de limpiar el suelo; de ese modo se puede sacar mucho provecho de él para alimentar los caballos ; se le ha de cultivar como lo tenemos ya dicho para el maiz ó malojo. Caña de azúcar. M. D. — G. 326. — Ese precioso vejetal es sin contestación ninguna el manantial mas caudaloso é inagotable de la riqueza de las Antillas; aunque bastantes vejetales, perteneciendo á otras familias vejetales, sirvan para producir azúcar, ninguno, sin embargo, puede competir deunamanera ventajosacon la caña de azú- car. Para ese objeto se cultivan en las Antillas algunas variedades de caña; la común ó criolla, que se considera como la mejor; la ama- rilla de Otahití, que es muy buena también; la amarilla de Borbon_, la puij|)úrea ó morada de Otahití y la de cintas; estas últimas no son tenidas ni por tan buenas ni por tan productivas. El señor Yray, en ñu Practical sugar Plaiiter, aconseja la introducción en las Indias Occidentales ó Antillas de otra variedad escelente de caña de azúcar conocida con el nombre de caña de Salangore, porque considera que retoña mucho mejor que ninguna otra clase y porque su rendimiento ó producto es, término medio, de 3,600 libras de azúcar por acre. Nos parece útil señalar aquí la composición química de las cenizas del azúcar pardo ó moscabado, á fin de que se pueda apreciar mejor la clase de suelo que será mas conveniente para su cultivo: 1,000 granos de azúcar moscabado han dado después de la incineración 7 1|2 granos de ceniza, que han dado con el análisis químico los re- sultados siguientes : sílice 1,78 ; — fosfato de cal 3,41 ; — peróxido de hierro y arcilla 0,17 ; — carbonato de potasa 1,46 ; — sulfato de DE LA. CAÑA DE AZÚCAR. 447 potasa 0,15 ; — carbonato de magnesia 0,43 ; — sulfato de cal 0,06. Todos los terrenos que pueden recibir labores con clarado, son útiles para el cultivo de la caña de azúcar, siempre que les compon- gan y preparen como conviene : muchísimos hay que solo exijen la preparación para recibir la caña y será siempre preciso darles la preferencia por causa de la escasez de brazos y del costo considera- ble de la mano de obra. Por causa de la importancia grandísima del objeto, no?! parece necesario asentar aquí algunas consideraciones prácticas sobre los suelos, mirados bajo el concepto de dedicarlos al cultivo de la caña. Los terrenos graníticos son muy buenos para tal cultivo; en efecto, los minerales que les constituyen siendo feldespato, mica y cuarzo, formados ellos mismos de sílice, alumina, potasa, cal, sosa, magne- sia, próxido de hierro, un poco de protóxido del mismo metal, óxido de magnesio y ácido fluórico, suministran al descomponerse todos los elementos minerales que pueda necesitar ese vejetal para su mayor y mas perfecto desarrollo; pero como á veces contienen poco mantillo, es preciso abonarles con materias vejetales descompues- tas, ó mejor y mas barato con los abonos verdes, del modo ya indi- cado mas arriba, páj. 431. Tales terrenos son muy fértiles, dan poco trabajo en el desyerbo, aporcado, corte y acarreteo de las cañas, facilitan mucho la elaboración del azúcar, que sale de primera cali- dad. Si el sub-suelo ao fuera arcilloso ó barroso bastante, seria muy útil y hasta necesario darle este elemento para que tuviera cohe- rencia suficiente para la vida de las plantas, cada vez que se le po- drá ejecutar con poco costo. Los terrenos cubiertos de rocas calcá- reas son muy favorables para el cultivo de las cañas, que se producen hermosas y dan un guarapo muy fácil de clarificar y muy rico ; pero en tales suelos no se puede trabajar mas que con la azada, trabajo largo, penoso y costoso, aunque por desgracia es el mas vulgarizado en las iintillas. Se ha de inferir de tal dato, y la esoeriencia diaria está acorde para corroborarle, que será siempre, no solamente bue- no, pero muy necesario en los terrenos no calcáreos, hace entrar bastante cal en sus abonos. Terrenos con piedras ferrujinosas : tales suelos, que son por decgracia bastante comunes en las Antillas, con- tienen piritas ó sulfures y piedras de próxido del mismo metal, con ácido colúmbico v alumina : de la misma clase son las tierras forma- das de piedras ferrujinosas, de barro colorado y las de piedras fer- rujinosas y de sílice colorada, las cuales consisten en paróxido co- lorado de hierro mas ó menos mezclado con materias estrañas. Luego siguen los suelos compuestos de piedras ferrujinosas y de barro amarillo : se conocen con el nombre de hidroperóxido de hier- ro, son de varios colores, desde el amarillo oscuro hasta llegar á ser casi negros: contienen peróxido de hierro hidratado, algo de peróxido de magnesio y sílice, algunas veces un poco de alumina : tales ter- renos son poco á propósito para el cultivo y nunca se habrá de de- dicarles á tal objeto: pero cuando pertenecen á haciendas ya plan- tadas es preciso que se compongan como conviene, dándoles abonos que les suministren lo que les falta, es decir, cal con bastante cantidad, á fin de destruir el mal efecto de los sulfuros de hierro. 448 APKNDICE 2". sales de potasa y de sosa, ó cenizas de la misma caña y estiércol mezclado con sustancias vejetales en descomposición, esos últimos se reemplazarán con mucha ventaja por los abonos verdes emplea- dos como lo tenemos dicho mas arriba, páj. 431. También los terrenos que vulgarmente se llaman de polvillo, con perdigones ó pirritas de proto-sulfuro de hierro en mayor ó menor cantidad, ó formados de sulfuro cúbico de hierro, lo que es el bisul- furo de ese metal : tales suelos, por desgracia bastante comunes en las Antillas, son muy malos. Cuando no se desagüen bien los terre- nos que contienen perdigones, especialmente de proto-sulfuro de hierro, son muy perjudiciales á la vejetacion, porque suministran mucho sulfato de hierro y ácido sulfúrico por causa de la reacción química que esperimenta el proto-sulfuro de hierro en presencia del oxíjeno húmedo de la atmósfera; tales tierras se dicen vulgarmente agrias : después de desaguado como conviene , es decir, lo mejor posible, es preciso para remediar tal estado de cosas aplicarles mu- cha cal, y hacer entrar en los otros abonos fertilizantes que pueden necesitar los álcalis que necesitan y también fosfato de cal ó huesos pulverizados. Los labradores chinos, dice el agrónomo Vray, no encuentran in- conveniente en cultivar las tierras agrias en los estrechos de las Indias Orientales ; en efecto, cuando un chino cultiva un terreno, parte generalmente del principio de que mas provechoso es cultivar un acre de tierra con todo esmero, que dos de un modo imperfecto, y en eso son mucho mas sabios que la mayor parte de los hacenda- dos de las Antillas, que al contrario creen sacar mayor producto de muchas cañas cuidadas así así y casi siempre en demasiada propor- ción relativa con los brazos de que pueden disponer, lo que es un error de mayor consideración, y sin embargo admitido: de ese modo los chinos obtienen en efecto de un acre de tierra tanto como lo que rinden dos y hasta tres acres cultivados ni bien ni mal. Siempre constante en seguir ese principio, el labrador chino escoje un pe- dazo de tierra que el puede manejar; corta las malezas, las deja se- car y luego las quema, después se pone á secar con mucho cuidado los troncones, las raices de los árboles y de las mismas malezas, les amontona, les cubre de tierra y les deja secarse, y cuando están bastante secos los montones les pega fuego y les asiste con constan- cia mientras estén ardiendo, á fin de que todo se consuma bien. Las cenizas y la tierra quemada *que resultan de esta operación las es- parce con mucho cuidado sobre el terreno, depues cava la tierra y mezcla todo con el mayor esmero. En seguida abre una zanja en derredor y con lo que de ella saca levanta un buen camellón sobre el terreno que ha preparado, para tenerle siempre bien desaguado y evitar que entren las aguas de los terrenos adyacentes ; finalmente vuelve á cavar el suelo y siembra en él sus cañas, así es que nunca se ve á un chino quejarse de aridez en su terreno arreglado así; hemos referido ese método de los chinos á fin de que se vea el cui- dado con que se debe preparar el suelo antes de confiarle las semi- llas, y sin embargo muy pocos lo hacen como conviene, y tal aban- dono es, á nuestro corto parecer, especialmente en los suelos poco DE LA CAÑA DE AZÚCAR. 449 apropiados, la causa de la poca utilidad que se saca de las haciendas de azúcar, que se quedan la mayor parte muy empeñadas j raras veces pueden salir del mal paso en que se encuentran. Los terrenos que contienen sal de comer ó cloruro de sodio en cierta cantidad, producen cañas hermosísimas, pero cuyo azúcar está espuesto á humedecerse j se vuelve deliquescente, lo que le perjudica mucho y proviene de que una cierta porción de aquella sal se ha cristalizado con él haciéndole higrométrico; por tal razón las tierras bajas que están en las costas del mar no son útiles para este cultivo, á menos que se les haga zanjas bastantes para bien des- aguarlas y camelones altos de tierra para protejerlas contra la in- vasión de las mareas. Los suelos de tierra colorada mas ó menos compacta, bastante comunes en las Antillas, son muy buenos para el cultivo de la caña de azúcar; están compuestos de arcilla, de sílice, de fragmentos menudos de piedras calcáreas, de carbonato de cal, de alumina, de materias vejetales en parte descompuestas y de óxido de hierro muy colorado. Tales suelos reposan rara vez sobre sub- suelos de barro, lo mas general es que sean de roca, de cascajo ó de coco y por esa razón necesitan bastante riego, porque se dejan pe- netrar con mucha facilidad por el agua que se escapa fácilmente. Cuando son compactos se mejoran muchísimo con la cal, con los abo- nos en que se encuentran sales alcalinas de potasa, de sosa y fosfato de cal, ó huesos reducidos á polvo; los abonos verdes les convienen también mucho. De todo lo que tenemos dicho se ha de inferir que el suelo mejor para el cultivo de la caña es aquel formado de calcá- reo silicoso ó feldespático, con bastante mantillo ó humus, algo de hierro peroxidado, con bastante humedad, sin ser pantanoso ni de- masiado húmedo, ni demasiado bajo tampoco, y cuando no tenga una composición análoga será preciso volverle así artificialmente por medio de los abonos correspondientes con la clase de terreno que se habrá de entregar al cultivo de ese vejetal. Después de preparado el terreno como conviene, se divide en cuadros de á 100 varas, se surca en líneas paralelas de una y media á dos varas, según la localidad, para hacer en ellos la plantación, que se hace de tres maneras. Por estacas : este medióse lia de prac- ticar solo en las tierras nuevas recien desmontadas y pendientes que no se pueden arar, y endondeno seria conveniente remover el suelo por temor que las lluvias arrastrasen io movido; en este caso se va hoyando por cuerda, con un plantador á propósito, demedia en media vara, plantando en cada hoyo una estaca, continuando así en hilera, con vara ó vara y media de distancia unas de otras, Como la caña necesita de mucha humedad y en los terrenos descolgados no hay regularmente riego y aunque lo hubiera pasa con demasiada rapi- dez para dejar la humedad suficiente, se debe hacer esta siembra en la primavera, después de establecidas las lluvias y en donde nortee con abundancia : en tales lugares se ha visto durar las cepas de caña hasta 15 años, dando cortes bien productivos sin renovarlas. El se- gundo sistema, ó de Patuco, consiste : después de el terreno prepa- rado y dividido á propósito, en ahilar y poner estacas correspon- diendo eada una al hoyo que tiene que abrirse, con vara á vara v T0»o II 29 450 APÉNDICE 2<». media de distancia entre cada hoyo y por todos lados ; así dispuesto todo, se hacen con el azadón hoyos cuadrados de como 10 á 12 pul- gadas de ancho y sobre como 6 de hondo, colocando horizontalmente en ellos cuatro toletes ó estacas, uno por cada lado y uno atrave- sado en el medio; eso hecho se les cubre con un poco de tierra, j cuando ya la caña ha salido y tiene la planta 12 á 18 pulgadas de alto ó algo mas, se da un desyerbo y á la vez se apoca, llenando así el hoyo con la tierra sacada al abrirle. En fin, el tercer método ó tendida consiste en pasar en el terre- no, dividido como hemos dicho ó dispuesto en tablones, después de dadas las rejas necesarias, el desterronador, que es un grueso cilin dro de hierro dentado que halan dos yuntas de bueyes ó mas y que gira sobre su eje, seguidamente se planea con la grada ó la rastra para igualar el terreno, después que con el peine ó arado dentado se haya limpiado de toda la basura : entonces se surca á la distancia de vara y media ó dos varas y á una profundidad como de 10 á 12 pulgadas y dentro de los surcos se va tendiendo la semilla, distante entre sí comxO de un palmo en los terrenos propios, pero en los me- nos feraces puede irse acercando hasta tocarse; eso hecho se cu- bren las semillas lijeramente con dos pulgadas de tierra y se riegan. En lo alto de los canelones, entre surco y surco ó entre hoyos, la tierra sacada al abrirlos, dispuesta á propósito, se puede aprovechar el terreno con maiz y caráotas ó frijoles, según la temperatura, y para que el maiz no sofoque la caña se ha de poner un canelón de maiz y otro de legumbres y así alternativamente. Cualquiera que sea el método de siembra que se escoja, la semilla será siempre la misma, es decir, que consistirá en toletes, cortos trozos de como un palmo ó 10 á 12 pulgadas de largo sacadas de la punta de las cañas, provistos de dos ó tres ojos ó yemas bien vivos. Cuando los renuevos tengan como un palmo de alto, se da un des- yerbo, si las cepas han nacido muy apiñadas, se destruyen las que sean necesarias para dar el desahogo á las demás y se vuelve á sem- brar de nuevo las que no han salido. Así que la caña principie á cerrarse se le da otro desyerbo y se cosechan las legumbres y el maiz; los riegos se darán según la estación, de manera que no falte ala caña la necesaria humedad, ni sea escesiv-a porque la agua- chine. Ese vejetal guajana ó echa las flechas ó flores en el mes de octubre ó algo mas tarde; cuando está así no se le debe cosechar, porque para florear ha perdido la mayor parte de su dulce y el jugo se ha vuelto muy acuoso ; es preciso pues esperar que se seque la panoja y que se haya vuelto otra vez dulce. Caando las cañas están casi maduras y que su caña principia á volverse amarillenta, en- tonces se suelen quitar las hojas inferiores y secas á fin de facilitar la madurez; pero se las deja en el suelo á fin de abonar el cañaveral y seria mucho mas provechoso si se las pudiera enterrar. Sazonada ó madura la caña, lo que sucede á los 12, 15 ó 18 meses de sembra- da, se procede al corte hilera por hilera á algunas pulgadas del ni- vel del suelo, dividiéndolas después de quitadas las hojas y de des- puntadas en algunos trozos de como vara y media de largo; eso hecho se la lleva al trapiche para molerla y elaborar el azúcar, ope- DEL CACAO. 451 ración muy importante, pero que no podemos describir porque nos llevaría demasiado lejos de nuestro objeto. De la punta de la caña así separada se saca la semilla, y la parte terminal que lleva las ho- jas del vértice sirve de forraje para los bueyes y caballos. Cacao. M. D. — G. 923. — Dos ó tres especies, ó quizás varieda- des, se creian naturales en las selvas de la isla de Trinidad, á saber: e\ Theoiroma süvestris, el gidanensis y otra clase. Ese árbol se co- noce con el nombre de criollo y de forastero: el primero ha sido, según unos piensan, sacado de Méjico é introducido en las Antillas; da un producto mejor que el segundo, que proviene del Brasil, y suministra mayor cantidad de fruto : esas dos clases se cultivan en las Antillas y algunas personas dan la preferencia al criollo; pero es en Venezuela donde se cultiva en escala mayor, y ese pais suminis- tra el cacao mas apreciado y mejor. Ese árbol principia á parir á los cuatro años de sembrado y cada año va produciendo mas, hasta que haya alcanzado la edad de 9 á 10 años, en que principia á dar mayor producto, y sigue así muchí- simos años casi sin trabajo ni gasto ninguno otro sino el necesitado para cosechar y preparar el cacao. El cultivo de ese vejetal es el mas conveniente para los de corto capital, porque necesita poco trabajo y por consiguiente muy pocos gastos. El barón de Humboldt dice, haciendo alusión á los Españoles de la América del Sur, que los plantíos ó haciendas de cacao pertenecen en general á personas de condición humilde y no muy acomodadas, que con sus hijos pre- paran, con tal cultivo, por sí mismos una fortuna lenta, pero segura; necesitan muy pocos jornaleros para ayudarles, y 30,000 palos de cacao, una vez llegados á la edad de su mayor producto, aseguran bienes de fortuna muy regulares para una generación y media ; por esta razón se deberían dedicar masen las Antillas á ese producto que lo que se ha hecho hasta ahora. Para ese cultivo se han de es- cojer los terrenos de aluvión ó vegas, con preferencia á los valles, en donde esté al abrigo de los nortes fuertes, desde el nivel del mar hasta 50 varas de elevación : es bueno, cuando se puede hacerlo, buscar una líjera esposicion al norte y en los lugares vecinos de los cursos de agua, á fin de que el suelo tenga siempre bastante hume- dad durante la estación seca y se pueda fácilmente desaguar du- rante la de las lluvias : es preciso escojer siempre con preferencia,, cuando es posible, los terrenos que pueden recibir el beneficio de las irrigaciones, sin que sean sin embargo espuestos á las crecientes ó avenidas, de las cuales se ha de defender el plantío por medio de ca- mellones dispuestos á propósito. Escojido una vez el terreno, se tumban los árboles, escepto los erithrinas ó búcares y los ingas ó guamas, que se pueden dejar, por- que su sombra es muy buena para el cacao : se cortan las malezas y •malas yerbas y hecho todo eso, tales sustancias, amontonadas como conviene y como ha sido enseñado mas arriba, se queman ; conclui- da esta operación se prepara el terreno con las labores necesarias, estirpando lo mejor posible los troncones, las raices de las malezas y de las yerbas, que entonces se quemarán también. Preparado el terreno se disponen los cordeles en línea recta, á una distancia una 452 APÉNDICE 2°. de otra que habrá de variar de 9 hasta 14 varas ó de 30 hasta 40 pies, según la clase de árboles que se empleará para protejer el plantío y la feracidad del suelo, y como 5 á 6 varas de un palo al otro, lo que se señala por medio de estacas puestas á esa distancia las unas de las otras y también en línea recta, cruzando las prime- ras ; todo así dispuesto, se principia por sembrar en el espacio que separa en la línea dos pies de cacao, un plátano y en el otro una erithrina ó búcare, ó un guama; en la otra línea se coloca un plá- tano entre cada cacao, sin búcare ni guama ninguna, y se sigue así hasta que todo el campo esté arreglado, y cuando estos vejetales, sembrados así de antemano, den bastante sombra, se hacen los ho- yos en los lugares correspondientes y se les deja abiertos durante dos meses antes de sembrar las posturas que se sacan del semillero. El búcare anaveo, erithrina umhrosa, ó el búcare peonio, E. cora- llodeiid.ron, se siembran de estaca, que se ha de cortar en el men- guante de la luna, conservará la sombra hasta el creciente, tiempo á propósito para colocarlas en la tierra, sea en el mismo campo, sea en un semillero á propósito, de donde se les sacará cuando se nece- siten. Para los semilleros de posturas de cacao se necesita un terreno muy bueno, bien preparado, en donde el agua no se quede estanca- da, pero bastante húmedo ó que se pueda regar con facilidad; debe estar abrigado del sol. Se hacen en él montoncitos de tierra, en el vértice de los cuales se colocan dos semillas recien sacadas de la cápsula madura, porque sin esa precaución indispensable no salen. Durante los 20 primeros dias de sembradas, se las debe dejar tapa- das con hojas de plátano ú otras y es preciso regar el suelo y evitar con cuidado que el agua no se estanque. La estación mas favorable á la siembra es el mes de noviembre : si por casualidad no fuera fá- cli regar el semillero, entonces se esperará la estación de las lluvias para confiar la semilla á la tierra : otros colocan las dos semillas en canastitos de bambú hechos á propósito, rellenos de tierra, y les en- tierran, y cuando se ha de trasplantar la postura se lleva dentro de su canastito y se la coloca así en el hoyo dispuesto para recibirla : hay algunos que no hacen semillero ninguno, pero la echan de una vez en la tierra del modo siguiente : después de haber escojido la semilla como sigue : se toman los mas hermosos y mas grandes fru- tos enteramente maduros y se echan las semillas al sacarlas en una vasija ó cubo conteniendo agua: las que sobrenadan se han de arro- jar, mientras las otras, bien limpias de la pulpa que las tiene en- vueltas, se vuelven á echar en el agua hasta que se siembran en ho- yos escarvados á propósito y dispuestos en líneas rectas, como lo teaemosya dicho, de un pié cuadrado y como de 6 á 8 pulgadas de profundidad y distantes los unos de los otros como de unos 10 á 12 pies á lo largo de las líneas ; abiertos de antemano se les forrará con una hoja de plátano ú otras como las del úbero del mar ó de alguna palmera, etc., de tal manera que sus lados salgan algunas pulgadas por encima del nivel del suelo, y después de dispuesto así á manera de cajita, se llena el hoyo ó mejor esa especie de cajita de tierra y tres semillas son entonces colocadas triangularmente en la tierra DEL CACAO. 453 con el dedo y á como unas dos pulgadas de profundidas, de manera que el germen encuentre por donde salir. Entonces se le tapa con el molde ó cajita, doblando la hoja por encima y con una piedrecita puesta sobre su vértice se impide que pueda abrirse: á los 8 ó 10 dias la joven planta aparece algo por encima del suelo: es preciso enton- ces abrir un poco las hojas á fin de darla luz y aire, bien que que- dando protejida contra los rayos del sol, lo que no se ha de descui- dar : necesitará de tal sombra artificial durante 5 á 6 meses : no me parece necesario hacer observar que el suelo preparado ya como lo tenemos señalado mas arriba, está provisto de los vejetales protec tores ya bastante crecidos para darla nombra útil : llegando los tres arbolitos ya como de IT á 20 pulgadas de alto, se corta uno por su parte mas inferior; los otros dos si son diverjentes se pueden dejar, pero mas veces se deja uno solo. Cuando la postura del semillero habrá alcanzado como 30 á 36 pulgadas, lo que tendrá lugar como á los dos meses de sembrada la semilla, se trasplantará en los ho- yos dispuestos como lo tenemos dicho mas arriba, se la habrá de ar- rancar con mucho cuidado y en maceta, para no dañar las raices. Al quinto año, cuando el cacao se hace frutal, se destruye el plan- tanal. Es preciso arrancar los plátanos con cuidado, á fin que al caerse no dañen los palitos de cacao, porque entonces los búcaros sembrados hacia el Sud-Oeste dan bastante sombra : tal operación tiene pues por objeto dar mas aire al plantío á fin que vejete con mas fuerza y vigor. Cuando los árboles de cacao habrán alcanzado como unos 4 pies de alto, se arreglará el tallo, y para eso si hay por casualidad algu- nos ramos que hagan al arbolito demasiado lozano, se les reducirá solamente á 3, dispuestos á igual distancia y según el vigor del pié; las hojas que de ellos salen se han de sacar ó se dejan : si tales ra- mos se inslinan hacia el suelo, se les agrupa en ramillete ó haz y se les ata así alzados, de tal manera que el tronco no se pueda quedar tortuoso ; algunos meses después de arreglados así, se íes corta como á dos dedos del árbol y se tiene en seguida cuidado en quitar todos los retoños que suelen salir de él y viven á sus espensas. Para conservar en buen estado una hacienda de cacao es necesa- rio, además de lo dicho, resembrar constantemente, tanto el cacao que falle como la sombra : este trabajo es de todo el año y cada vez que se da una limpia, sin dejarlo para después, mas en cuanto á la sombra, cuando los búcares están cerrados ya no se pueden reponer, porque los nuevos se mueren por causa de la demasiada sombra; en- tonces se ha de reemplazarles con aguacates; pero como esos árboles no se esparcen ni se elevan tanto, es preciso ala altura de tres va- ras se descogolle, dejándole y manteniéndole en dos coronas de á tres ó cuatro barazos cada una, forzándolo así á robustecer y espar- cir estas ramas. El orore y el guano también prosperan debajo de la sombra, pero su incremento es mas lento; sin embargo pueden ponerse algunos de estos árboles salteados cuando las fallas se repi- ten demasiado. Los enemigos del árbol de cacao son en primer lugar el sol, cuyos rayos le pueden hasta matar : algunos gusanos le atacan, royendo 454 APÉNDICE 2**. su corteza, y al penetrar en su interior le hacen perecer : el único remedio que hasta ahora se ha ernpleado con buen éxito consiste en matarlos, y para eso se ha de reunir á los peones que les buscan : otro gusano se come las hojas tiernas al principio de la estación de las lluvias ; hay años en que su abundancia es tal, que todo el peo- naje empleado basta apenas para destruirle; tiene como cuatro pul- gadas de largo y el tamaño del dedo ; la mariposa de donde proviene pone sus huevecitos sobre las hojas del cacao dispuestas en grupos que figuran una peseta; se les debe buscar y destruir con mucho cuidado ; los que por desgracia se escapan se vuelven crisálides que al año siguiente producen otras mariposas que se destruyen hacien- do hogueras de manera que no puedan dañar á los árboles, pero cuya luz les llame de modo que se caigan en ella ó que se les mate en su derredor. Los aserradores parecen los primeramente señala- dos, bien que sean un poco mayores y blanquecinos : se alimentan encima de los ramos, en donde se les ha de buscar para matarles; en fin, otro insecto llamado vachaco ocasiona mas perjuicio todavía porque se come los petalos ú hojas de las flores: para destruirle es preciso ir á buscarle en la tierra, y para eso se ha de echar agua en los lugares donde se sospecha la presencia de sus nidos y removién- dola á manera de mezcla se les mata; de ese modo el mal está dis- minuido, sino enteramente remediado. A los insectos siguen los pájaros y los cuadrúpedos : los loros y los conotos se comen el fruto, lo mismo que las ardillas que dañan mu- chas mazorcas. Ha de estar siempre pues en un cacagual un hombre destinado esclusivamente á la destrucción de estos animales por me- dio de la escopeta : escusado es decir que además debe estar bien cercado á fin que el ganado no entre en él. Además de todo eso es preciso tener mucho cuidado en que los palos de cacao estén siem- pre limpios de las plantas parásitas, de los bejucos y enredaderas, de los musgos y liqúenes que las invaden con tanta frecuencia vi- viendo á sus espensas ó ahogándoles, y también de los chupones y renuevos. Los cacaos llegados á dar ma3^or producto están dispuestos á ser atacados por una enfermedad llamada mancha; entonces en su parte inferior aparece un matiz ó una mancha negra dispuesta á manera de anillo y que abandonada á sí misma le mata. El modo de reme- diar el daño que puede hacer esa enfermedad consiste, al principiar las manchas, en hacer una lijera incisión que penetre en la corteza; pero si á pesar de tal operación la mancha sigue estendiéndose, en- tonces se debe estirpar toda la parte invadida, después de curada la corteza, se queda sin embargo moradita en los lugares que han pa- decido. Reasumiendo lo dicho se verá que para conservar en buen estado de producto y de vejetacion un plantío de cacao, es preciso que siem- pre tenga sombra é irrigación ó humedad suficiente, que sus ramos estén siempre bien limpios de las yerbas enredaderas y bejucos : es indispensable que los canales ó zanjas de irrigación se profundicen en proporción del crecimiento de los árboles, á fin de que las raices estando al nivel del agua puedan recibir la humedad necesaria. Los DEL CACAO. 455 riesgos deben darse siempre con la fresca, es decir, desde las cinco de la tarde hasta el anochecer, ó en los días que no sea el sol fuerte; en cuanto á los desagües se abrirán por medio de las calles para no lastimarlas raices. Con tales cuidados se hace el plantío mas her- moso, mas productivo y mas duradero : cuando los árboles paren bien no se les debe quitar ningún ramo, porque aunque esta opera- ción haga la cosecha siguiente mas abundante, tal esfuerzo fatiga el vejetal y puede hasta morirse, según la calidad del suelo mas ó me- nos rico en que vive y el número de ramas quitadas. Cuando los ga- nados pisan el suelo, el plantío se hace con eso menos duradero mientras las irrigaciones hechas con intelijencia tienen el efecto enteramente contrario. Tres causas hay que perjudican la cosecha haciendo secarse el fruto sobre el árbol é impidiéndole así llegar á su tamaño y á su ma- durez : la 1^ consiste en que el plantío se haya quedado anegado durante largo tiempo, bien que algunas veces se ha visto suceder solamente después de 30 horas de inundación; 2' las lluvias abundan- tes, especialmente eu los valles por sí mismos ya húmedos . se re- media tal inconveniente con bastante facilidad por medio del desa- güe del terreno, hecho por medio de un buen desaguadero dispuesto de antemano : en fin, la falta de bastante humedad ó su irrigación intempestiva, es decir, durante que los rayos del sol estén ardiendo con mayor fuerza, porque el vapor que se exhala entonces mata á las frutas : si ha llovido durante algún tiempo y que después de eso el agua caiga á cántaros, el fruto se seca ; eso sucede también cuan- do el árbol pare mas frutos que los que puede criar naturalmente; se remedia con facilidad quitándole una parte de ellos, y espe- cialmente aquellos cuyo aspecto es menos bueno : la mala calidad del terreno produce también ese mal efecto : en ese caso los frutos contienen á la vez semillas buenas y malas ó abortadas, lo que se llama cocosearse ; se puede remediar tal estado de cosas suminis- trándole el abono necesario. Ese árbol empieza á fructificar á los 4 años : va progresivamente aumentando hasta los 8, en que llega á su robustez : permanece por 15 ó 20 años, según el sitio y la fertilidad del terreno, y de los 30 adelante empieza á decaer, hasta su muerte que llega á los 40 ó 50 años ; cuando se va á derribar un ahilado para reponerlo por viejo ó improductivo, el año antes se le da una poda formal para que su última cosecha sea abundante, y después se muere. Tales árboles dan dos principales cosechas al año : la 1^ hacia San Juan, y la otra á finos de diciembre; sin embargo, como el árbol está echando unas flores todo el año, hay siempre algunos frutos maduros que se han de recojer á medida que se hallan buenos, mas los propietarios suelen hacer de tal suerte que no se cosechan sino al menguante de la luna, porque tienen observado que de este modo el cacao es mas sólido y menos sujeto á dañarse ó á podrirse. Por término medio una cuerda de tierra tiene sembrados 868 pies de cacao, que produce cada uno como dos libras de habas al año y á veces alj:o menos; otras veces produce mas y se han visto palos pri- vilejiados parir hasta 10 libras, según lo dice Purdié, para la Tri- 456 ArÉNDiCE 2°. nidad. Lunam refiere que en Jamaica ha observado pies de cacao producir hasta 20 libras j en suelos malos y pobres 8 : tal producto nos parece á nosotros algo exajerado j tales árboles no pueden se- guir así ún morirse pronto estenuados. En la casa de habitación debe haber dos cuartos y dos corredores destinados al beneficio del cacao ; los corredores han de mirar uno al naciente y otro al poniente, por lo que el cañón de la casa debe estar de norte á sur. Esta situación tiene por objeto que en la esta- ción lluviosa en que no se puede echar el cacao al patio esté enten- dido y reciba en estos corredores el sol de la mañana en el del Oriente, y el de la tarde en el de Occidente. Además se abrirán dos patios, el uno natural con su suelo de tierra, y el otro enladrillado, para echar en el primero el cacao fresco como sale del debabadero á recibir el dia del sol y á soltar la baba, y en el segundo los siguien- tes dias á recibir la condición. Como ya lo tenemos dicho, el cacao fructifica todo el año, pero con mayor abundancia en los meses de julio y de diciembre, lo que se llama la cosecha de San Juan y Natividad; así es que todos los meses han de recojerse las mazorcas sazonadas, lo que se llama pa- sar vara. Los peones ó peonas que han de hacer la recolección del cacao ó la cosecha deben ir hilera por hilera y mata por mata, y después de haber examinado si hay algún insecto perjudicial ó da- ñino en el árbol, que pueda repararse, procederán á descargar el fruto, armados de una desjarretadera en bastada en una vara de 9 pies de alto, para con ella derribar las mazorcas que no alcancen con la mano, dejándolas caer al pie del árbol : se han de escojer para esta operación las mas intelijentes y de mejor vista, para que acier- ten á derribar solamente las maduras y las ya sazonadas, aunque no estén en toda su madurez; detras de cada vara irán una ó dos mujeres ó jóvenes, que no ganen el jornal entero, con un canasto recojiendo las mazorcas del suelo que irán depositando y apilando en un punto dado, hasta que la distancia requiera otro punto de de- pósito, procurando que estos depósitos ó montones estén lo menos posible en cada ahilado. Concluido el paso de vara ó la operación anterior ó recolección de las mazorcas se procede al desgrano ; para eso se prepara y se limpia el suelo cerca del montón y cubriéndolo después con hojas frescas de plátano que se llaman cama. Ese tra- bajo se divide en dos operaciones, picando unos las mazorcas del montón y otros recibiéndoles en la cama para abrirlas y desgranar- las ; los picadores deben ir examinando las mazorcas, desechando las podridas y picadas, poniéndolas á un lado con las que no están bien sazonadas y procurando que al darles los piquetes cruzados, no lle- gue el corte á dañar los granos. Los desgranadores ó desgranadoras procurarán que en la cama queden los granos solos sin pedazos de concha, y para facilitar esta operación se armarán de una paletita de madera que limpie las cajitas de las mazorcas. Concluido el des- grane, se carga el cacao fresco en baba, para reunirlo en el cuarto destinado para desbabadero, donde se acumula todo lo sacado, y así se sigue de pila en pila. Las mazorcas apartadas por no estar madu- ras se reúnen y se cubren con las hojas en un solo montón, y á los DEL CACAO. 457 dos 6 tres dias se pican, se desgranan y agregan al depósito. Al dia siguiente ó al inmediato en que haga buen sol, se echa en el patio de tierra, si está seco, para que chupe y absorva la baba del cacao, estendiéndolo muy delgado ; si el tiempo no es muy favorable, y si aunque no esté lloviendo el patio está húmedo, se echará en el hor- migón ó ladrillo rastrillándolo á menudo, cuidando sobre todo que no llueva sobre él. En esta primera tendida se recejen las pelotas en que hayan quedado los granos unidos para desunirlos; con el primer dia de sol se vuelve á poner en pila en el otro cuarto y se deja así 48 horas; entonces se vuelve al patio de hormigón en donde se ha esparcido tierra colorada, ladrillo molido y almagre; allí se echa el cacao y se remueve para que todos los granos se hallen igualmente en contacto con la tierra ; después de este segundo dia en que solo se le darán cuatro horas de sol, se le dan dos ó tres al siguiente, y si aun no queda bien seco se le dará otro rato después. El cacao en condición debe estallar la concha al partirlo y la almen- dra en lo interior como en la superficie pelada de un morado oscuro y que no presenta ningún punto blanco interiormente. En este es- tado se guarda en el almacén y está disponible para su venta, pero antes se le limpia de la tripa y pasilla ó pedazos de concha que ha traído del campo y se hayan escapado durante la seca. Si se descu- bre en el almacén alguna palomilla ó grano picado, se le echará un poco de sal molida, como una libra por cada cuatro fanegas, paseán- dolo de un estremo ol otro del almacén, que debe mantenerse cer- rado, mientras el cacao pueda remitirse al mercado. Después de secas las habas como conviene, se las debe tener guardadas en almacenes de madera bien secos y sin luz ni humedad ninguna, cuyo suelo de madera ó entablado estará como á unos dos pies de tierra. Las habas de cacao que principian á dañarse se pre- servan de una entera descomposición aplicándolas una pequeña cantidad de salmuera, removiéndolas después para que se mezcle igualmente con ellas. Todo lo que acabamos de decir corresponde al cacao criollo ó leji- timo de Caracas ó de Venezuela; ahora hablaremos del cacao de Trinidad ó de Carúpano. El árbol es mas corpulento, mas abundante en producto, por consiguiente ocupa mayor espacio de terreno, re- sitte mas la mala estación, no padece enfermedad y no está tan acometido por los insectos, pero requiere el grano seis dias de ca- lent'íra después del primer dia de sol, en lugar de dos que necesita el cri 'lio para que el cocimiento penetre el grano, que es mas duro y mas amargo. No se le debe mezclar en la recolección en los caca- guales en que está mezclada la arboleda con el criollo, porque en este caso ó se pasaría de cocimiento el uno, ó quedaría crudo el otro. El beneficio del cacao de Trinidad es igual al otro y varia solo en su cultivo en la distancia, que por ser el árbol mas corpulento debe dársele medía vara ó tres cuartas mas. Suponiendo, dice el señor don José A. Diaz en su obra titulada : " El Agricultor Venezolano, " que en cada año se funden cinco mil árboles, los gastos los ha dado la mitma fundación en los frutos me- nores con escepcion de los del caporal, del cocinero y manutención 458 APÉNDICE 2^. de estos y del dueño, y como el cultivador de frutes mayores no ha debido desdeñar ni la cria de aves, ni la ceba de cerdos, puede com- putarse su gasto adicional en 350 pesos al año, que son en los pri- meros cuatro años 1,400 pesos ; el gasto ó costo de la casa y patios necesarios en 2,600 pesos, que con la suma anterior hacen 4,000; ya para el quinto año, el primero y el segundo ahilados, producen para cubrir el primer cálculo y por total resultado tendremos al fin un capital de 20,000 pesos que vale la hacienda adquirida con 4,000, y una renta de 2,000 pesos anuales de los diez años en adelante, calculada la fanega del cacao al módico precio de 25 pesos; para ese cálculo se han considerado en detalle todos los trabajos. Café : árbol ó palo de café. M. D. — G. *738. — El cultivo de ese vejetal conviene también mucho á los que tienen un capital corto, porque los gastos que necesita son pocos, será pues por tal razón sin duda que este ramo de agricultura va estendiéndose mucho en la isla de Puerto-Rico. Los terrenos como sigue son los mas á propósito para ese cultivo: en primer lugar, el suelo de las selvas poco espesas en que se halla una capa considerable de detritus orgánicos, de humus ó de manti- llo por consiguiente : en tales sitios el cafetal es muy duradero ; en segundo lugar viene el terreno de color parduzco oscuro y hasta casi negro, que, sin tener mucha arcilla, parece á la vista que con- tiene madreporos ó sustancias calcáreas; los suelos con depósitos calcáreos, rojizos ó amarillentos son inmejorables para ese cultivo; en efecto, los cafetales en tales terrenos duran bastante y son muy productivos, pero tienen el inconveniente que las posturas tienen difitultad para hacer penetrar sus débiles raices en él, lo que con frecuencia los hace perecer; se puede, sin embargo, remediar ese inconveniente con bastante facilidad por medio de bastantes labo- res que desmenuzan la tierra como conviene ; en tercer lugar, el terreno desmenuzable, como se le encuentra generalmente en las cercanías de las tierras volcánicas ; tal clase es muy á propósito para el cultivo del café, pero tiene el inconveniente de contener muy poco alimento orgánico para el árbol: de tal manera que dichos cafe- tales son poco duraderos si no se les abona con sustancias orgánicas empleadas en suficiente cantidad. En fin, los terrenos muy arcillosos y pedragosos á la vez no son á propósito para esa clase de cultivo. Según Ponac, el bagazo que se queda después de la estraccion del aceite de coco constituye un abono estimulante muy bueno y muy á propósito para los cafetales : tiene solamente el inconveniente de durar poco; la cal es de aplicación diaria para ese cultivo, especial- mente en los suelos compactos, y además hay que saber que ese vejetal contiene 60[100 de esa sustancia en sus cenizas; los huesos reducidos á polvo son para él un abono magnífico, pero cuyo incon- veniente consiste en su carestía; el estiércol es muy bueno y mas veces conviene mucho el emplearle ; el guano no parece muy apro- piado á ese cultivo; la pulpa que proviene de su uba después de me- dio podrida constituye un abono muy bueno para él. Los sitios elejidos para plantar cafetales han de estar protejidos contra los vientos del sud-este y del norte, cuya inñuencia es bas- DEL CAFÉ. 459 tante mala, y la mejor esposicion para ellos es la del oeste y la del sud-oeste ; deben tener una cierta sombra ó estar protejidos durante los rayos ardientes del sol por medio de los mismos árboles señala- dos para igual uso en la plantación de cacao, á saber los búcaros y los guamos. Los llanos no le convienen tanto como los lugares altos cuya elevación se encuentra entre 1,000 á 4,000 pies por encima del nivel del mar con una temperatura de 75 á 90^ farenheit ó como 23 á 25" centígrados; el sol al salir es muy favorable para ese ve- jetal. Después de limpiado el terreno de las yerbas y bejucos, du- rante la estación seca, y arrancadas las raices y troncones, todo eso seco se quema y las cenizas que provienen de esa operación se han de esparcir por encima del terreno ; eso hecho se pasa el arado si el terreno lo permite, pero mas veces se limitan á escarbar los hoyos con la azada dispuestos en línea recta, á la distancia de como 6 á 8 pies el uno del otro en las tierras calientes, mientras que en los ter- renos mejores, con temperatura mas bajita, el intervalo habrá de ser de 7 á 9 pies de un palo á otro, quedándoles abiertos durante algunos meses antes de la siembra, para que la tierra que ha de co- locarse en contacto con las raices pueda aprovechar la influencia atmosférica ; además se habrá de repartir la ceniza con la tierra de los hoyos ó los abonos si se necesita alguno ; tales hoyos han de te- ner un pié cuadrado y otro tanto de hondo ; las líneas á lo largo de las cuales están dispuestas estarán como á 12 pies una de la otra ó de calle ; todo listo de antemano se saca el plantel del semillero ó almacigo que ha sido dispuesto á propósito, cuando tiene como un pié de alto, sea á la mota, sea á la mano : ese modo es el mas usual y el mas económico bien que defectuoso; el primer método de sa- car la postura á la mota consiste en cortar oblicuamente la tierra con el chicuron como á 2 pulgadas y media en derredor del tallito y hasta como 5 pulgadas de profundidad; se levanta entonces el plan- tel con la tierra húmeda adheriendo á sus raices y se la envuelve con una hoja de plátano ú otra para que no se caiga la mota, se les coloca en especies de canastos á propósito y se les lleva con cuidado al sitio elejido y preparado para la siembra; entonces se coloca uno en cada hoyo cuya tierra bien movediza está aplicada en cantidad de unas 6 á 8 pulgadas al principiarla estación de las lluvias. Ordi- nariamente en Puerto-Rico se saca la siembra de los cafetales ya en producto hace algunos años, arrancándolas con la mano, después de haber volcado con una estaca el terreno donde está á fin de que no se rompan las raices, se las junta como en número de 50 ó 100 matitas, cuyas raices se envuelven en hojas de plátano mojadas y se las ata, llevándoselas al lugar dispuesto para recibir la siembra y se la hace del modo ya señalado para los planteles de cacao en mo- ta. No es preciso decir que la sombra que necesita el cafetal se la da del mismo modo indicado al hablar de los cacaguales; pero en Puerto-Rico se suelen sembrar los cafés por debajo de los árboles sin tumbarlos, limitándose á limpiar por debajo de ellos el suelo como corresponde, tumbando solamente algunos árboles á medida que el cafetal necesita del aire dejando los guamas y otros cuya som- bra es favorable. 460 APÉNDICE 2°. Se prepara cerca del ahilado ó terreno dispuesto para formar el cafetal un pedazo de tierra capaz para un almacigo ó semillero de doble número de plantas al de las estacas puestas, porque se debe tener siempre sobrantes. Este terreno se pica, planea y riega, si no lo han humedecido ya suficientemente las lluvias, después se va con una estaquita hoyando por cuerda á distancia de una tercia, colo- cando un grano en cada hoyito, cubriéndolo de tierra ; si el almaci- go está hecho al descubierto, como es natural, el primer año, se cubre formando troje de vara y media de altura, sobre la cual se tienden unas hojas de plátano, las que á medida que se van secando dejan penetrar algunos rayos del sol que son muy convenientes para robustecer la planta ; estos almacigos deben conservarse regados y frecuentemente limpios para cuyas labores se ha de emplear la pe- queña escardilla. Se pondrán los plátanos, cambures ó topochos por el medio de las calles á cuatro varas y los bucares en la misma dirección entre plá- tano y plátano, pero dejando dos claros vacíos, de manera que estén los bucares á la distancia de 12 varas entre sí por todas partes, á cuyo fin se dejarán también dos calles sin bucare, dejando las esta- cas en su puesto marcando el lugar que deberá ocupar el café en los nortes ó en el siguiente año. Esos trabajos han de hacerse á entra- das de las aguas por mayo ; los ahilados de cada edad deben divi- dirse y nominarse; así se hará también para el cacao y se aprove- chará el vacío de las calles con dos hileras de maiz, cada una á vara y media de distancia y á tres granos en cada piquete, y por la hilera de estacas, entre unas y otras, dos palos de yuca equidistantes ; se hará lo mismo para el cacao. Cosechado el maiz y puesto el café se mantendrá el ahilado siem- pre limpio á azada, repitiendo la siembra de frutos menores en cuanto lo permita la sombra de los plátanos que pueden conservarse cinco años, después de los cuales conviene destruirlos, porque im- piden la corriente libre del aire; á los seis años está el café perfec- tamente frutal, sin haber dejado de dar algunas cosechas en los an- teriores. En los terrenos fértiles ó que convienen á tal cultivo, ese vejetal se desarrolla y crece bastante pronto. Algunos agricultores piensan que el árbol del café se descogolle ó cape á la altura de dos varas y aun menos en las tierras frias y se mantenga en este porte, quitándole constantemente los renuevos; otros que se descogolle y se mantenga un año desretoñado para que robustezca el tronco, dejándolo después vejetar en libertad, y, por fin, hay otros que son del parecer de no descogollarle, dejándole na- tural. El medio término entre esas varias opiniones será lo mejor en la zona templada y aun en la cálida y el primero en la fria. Des- pués que el café es frutal necesita tres labores anuales, un desyerbo de azada en enero ó febrero, después de la cosecha ; otro de-machete en junio, después de las primeras aguas, y otro de azada ó machete, según la estación, al aproximarse la cosecha de setiembre ó á prin- cipios de octubre. Cuando pasados algunos años y á pesar délas dis- tancias dadas las ramas muy crecidas y chupones se doblan y caen sobre las calles, cruzándose é impidiendo el tránsito, se ponen peones DEL CAFÉ. 461 con machete en mano, á aclarar la calle, cortando los ramos de uno j de otro lado, sin atender á si están lozanos ó secos, que no hay temor que este corte le perjudique, antes por el contrario produce mejores efectos, retoña, se viste de nuevo y sus renuevos duplican la cose- cha; estos piquetes después se repiten cada tres años ó cuatro, se- gún lo requieran los estorbos. En las pendientes deben economizarse los desyerbos de azada, por el inconveniente de llevarse las aguas la tierra removida, y en los desyerbos necesarios de las plantillas pro- curar que vayan los despojos acordonados de arriba abajo por las hileras de café, dejando las calles limpias á que sirvan de cauce. El fruto que con mas utilidad se puede sembrar para aprovechar la tierra de las fundaciones en la zona fria, es la caráota. En Puerto- Rico ordinariamente no se suele descogollarle. Debe haber patios y corredores correspondientes con la cose- cha. El patio puede reducirse si se decereza, porque entonces se seca con tanta prontitud como el cacao; pero si no se descereza y que se queda trillado ó en parapara, se necesita para secarle 15 dias de buen sol, v en el discurso de la cosecha se puede hacer solo tres tendidas, así es que una cosecha de 300 quintales necesita un patio que contenga 100 quintales, y conteniendo cada treinta y seis varas un quintal en cereza ó parapara, resulta que el patio relativo á la cosecha supuesta debe tener la estension de 10,800 varas cuadradas ó un cuadro de 60 varas. Además de las ventajas de pronta seca y ahorro de patios, el café descerezado tiene la especial de mas valor en el comercio, regularmente en un quince por ciento, aunque para el uso el en parapara bien seco, guardado algún tiempo, conserva mas aroma y es de mejor gusto; el café se descereza con máquinas á propósito. Si se ha de descerezar el café, debe cojerse el grano maduro ó que ya esté amarillo próximo á madurar; los cojedores ó cojedoras de- ben ir suficientemente provistos de canastos y sacos para que no lo echen en el suelo. En la recolección del fruto, cada cojedor tomará una hilera por su cuenta, y un vigilante ó mas, según la tendida de la gente, irá revisando por detras, á fin de que no quede en la mata grano maduro y que recejen del suelo uno á uno los que hayan cal- do. Junto á la máquina de descerezar habrá un pequeño patio enla- drillado y muy aseado, donde se mida y deposite el café que se va á descerezar. Después de descerezado, lavado en un estanque á pro- pósito para quitarle una sustancia mucosa que adhiere el pergami- no, se le amontona para que escurra el agua, y poco tiempo después se echa bien estendido en el patio enladrillado ; si ese primer dia de seca hace un buen sol se recojo por la tarde y se trae al corredor ; al siguiente vuelve al patio, se le da medio dia de sol removiéndole con el rastrillo dos ó tres veces; al tercer dia se le da otro medio dia de sol y se vuelve á reti.^ar ; entonces se examina si está en con- dición de guardarlo, para lo cual se le quita el pergamino que le cu- bre y se prueba mordiéndole ó a¿.l¡cándole la uña; si estrella en el diente ó no cede á la presión de la uña, está perfectamente seco y en estado de ir al almacén ; en el caso contrario, se le debe dar otro rato de sol. Si durante este beneficio sobreviniere mal tiempo, se 462 APÉNDICE 2°. abrirá y removerá en los corredores hasta que haga sol, y con esta precaución no sufrirá ningún perjuicio El café en parapara, concha ó ubas, se recoje del mismo modo, graneado si la maduración está muy desigual, pero si proviene de un floreo igual y unos granos están maduros, otros pintones y el resto, aunque verdes por defuera, ya tengan bastante cuerpo, ya estén jojotos, se puede recojer todo ala vez. Si la recolección es menos de 10 quintales diarios se reunirá en el patio, amontonándola de dos dias para que con el calor acaben de sazonar los granos mas atrasados. Entonces la temperatura se eleva bastante y determina en el suco de las ubas una especie de fermentación ó quizás una ma- durez mas perfecta, cuyo resultado es facilitar mas luego su diseca- ción y hacer mas fácil la separación de una película, como plateada, que está adheriendo á la semilla por adentro del pergamino y que no se puede quitar de una sola vez, el café que se queda todavía con esta película se llama en el comercio café gris, y es de un precio al- go inferior á la buena clase limpiada. Si escede de 10 quintales se estenderá diariamente lo mas delgado posible. Si el tiempo está bueno, se le empezará á dar pila todos los dias á las tres de la tarde y estension á las nueve de la mañana; de esta manera conservará toda la noche el calor recibido del sol durante el dia y el patio es^ ya caliente cuando se vuelve á estender, continuando la seca sin in- terrupción; da por último resultado el café amarillento tan aprecia- do en Francia. De ese modo se puede trillar café de parapara en condición con un tiempo favorable en 12 dias. Si entre tanto llueve y el café solo tiene cinco ó seis dias de sol, se deja á merced del tiempo, pues, con tal de que se remueve, no se desmejora á menos que se prolongase demasiado la mala estación; en la zona cálida se necesitan á veces hasta 18 dias para que esté en condición. En Puerto-Rico se usan secadores de cajón muy buenos y útiles, pero solo por una cosecha escasa, que tienen la ventaja de evitar el mal tiempo y de aprovechar cualquiera rato de sol. Se conoce que el café está bastante seco del modo siguiente: tomado un manojo de café se acerca la mano al oido y al sacudirle la haba ó semilla debe hacer ruido libremente en el casco, ó se ensaya mordiéndose la parapara con los dientes, y si el casco es muy frájil y si la semilla se rompe también con bastante facilidad y está crispada, eso indica que el fruto ya está bastante seco. Así preparado, el café se coloca en el almacén dispuesto para recibirlo y tenerlo guardado hasta que se le trille, pile ó machaque para quitarle el casco. Pero, á nuestro pare- cer, se deberla mandarle á Europa en casco la parapara, á fin que se conservase mejor el café, fuese de calidad muy superior y se apro- vechase allá el casco, como lo tenemos dicho ya en el Compendio de terapéutica vejetal. Hay tres procedimientos para despojar el grano de las conchas : el primero consiste en emplear una máquina apropósito llamada tri- lla : es el mas económico; en el segundo se emplea el mandador, para eso se estiende el café lo mas seco posible en capas de media vara ó una tercia sobre un patio de tierra. Allí los peones, dando vueltas al rededor de la tendida, descargan los mandadores, procu- DEL CAFÉ. 463 rando que la operación yaya igual en las orillas j en el centro; cuantío se habrá estendido demasiado se volverá á reunir el café y se repetirá la operación hasta que quede la mayor parte de los gra- nos despojados, porque si se esperaba que lo fuesen todos muchos se quebrarían lo que se debe evitar. Zarandeado entonces se sopla y se lleva á la escojedura ; se ventea en venteador ó á brazo en bateas, á falta del primero. En fin, el tercero es el del pilón á brazo, que es mas costoso que los dos primeros. Las máquinas de trillar y ventear soD de necesidad solo en una cosecha que pase de 300 quintales, pero en una cosecha menor no merece la pena en cuanto á econo- mía. Después que el café está trillado ó pilado, soplado y despara- parado ó despojado en la zaranda de los granos que no se descon- charon ya no se puede depositar en el suelo, porque se blanquearla ó desmerecerla ; para eso se deben tener preparados cajones ó sacos, etc. En ese estado se procede entonces á la escojedura, para cuyo trabajo son mas á propósito las mujeres, á cada una de las cuales se le entrega una batea pequeña de ventear y dos ó mas canastos va- cíos, según su capacidad ; si los canastos sonde seis almudes bastan dos, y se le entrega para escojer un quintal del depósito ; esta mu- jer ha de repetir la operación de ventearle en pequeña batea y en pequeñas porciones, soplándolo y cerniendo para quitar el resto del polvo, basura, las piedrecillas y cualquier otro cuerpo estraño, y así lo va repasando y depositando en uno de los dos canastos ; con- cluida esta operación toma la zaranda de alambre número 5, y en esta vuelve á repasar todo el café, cerniéndole y quitándole lapara- rita menuda y granitos enconchados que salieron ó pasaron en el primer zarandeo por ser iguales á los granos mondados ; esto así purificado se va pasando al otro canasto, y está ya en disposición de echarse en la mesa de escojerlo; entonces se va repasando todo quitándole los granos negros, los blaní^ueados y con cualquiera di- ferencia notable se encuentra entre ellos, de manera que estendida la porción ya escojida se presenta igual á un golpe de vista; enton- ces se va pasando al otro canasto vacío para entregarlo al inspector que debe ser el dueño ó el mayordomo y está en disposición de marchar al mercado. La tarea regular para una mujer es de un quintal, pero esta varia según el estado del café; en efecto, si es bueno porque se habrá cojido en sazón y se habrá secado con buen tiempo, tiene menos que hacer y por consiguiente rinde mas y pue- de escojer hasta dos quintales; pero hay ocasiones en que por ha- berse cojido muy verde y haber hecho mal tiempo durante su seca, está tan malo que apenas las mas intelijentes y prácticas pueden componer dos almudes, que es la tercera parte de un quintal. Por la zaranda número 5 pasa el cisco ó cereeere, que es el café casi que- brado por el pilón ó el mandador, que separadamente se vende por la cuarta parte del precio del bueno ó se deja para el gasto de los trabajadores, que es lo mas usual. La escojedera de los granos ne- gros ó averiados da el café llamado de tercera, y se vende por la mi- tad del precio del de primera. Un cojedor esperto, en una arboleda medianamente cargada, receje, de las 6 de la mañana á las 4 de la tarde, doce almudes, de lo que resultará la tercera parte de un quin- 464 APÉNDICE 2°. tal, y para que una cosecha sea bien recojida debe calcularse un peón ó peona por cada 10 quintales ; pero por esmerada que sea la recolección, y aun en esta proporción de trabajadores, se pierde en el campo 1(15 por ciento. En el café que se descereza se pierde mas porque como solo se ha de cojer el maduro, en cada una de las ma- tas hay granos que aunque están sazonados no están pintones, y muchos de estos se escapan al cojedor, los cuales ya han caido cuan- do llega el segundo repaso y lo mismo sucede en este para cuando llega el tercero. En las haciendas de sequero solo se puede descerezar media conie- cha, porque si se espera á que se madure para recojerlo cuando vaya á los últimos repasos , ya se habrá caido la mitad del todo. En los cafés regados hay la "v entaja que ha floreado dos ó tres veces por razón de los riegos y la maduración es mas desigual. El café secado en parapara después de limpio y escojido ha disminuido seis veces su volumen primitivo quedando reducido á seis almudes de ley bien medidos ó llenos los diez y ocho sacos sin trilhar. El beneficio ó tri- lla por el mandador economiza sin duda, porque á cada peón se le ponen 36 almudes ó dos quintales, mas tiene la desventaja que como ese trabajo se hace á campo raso, recibe el calor del sol de todo el dia, perdiendo algo de su color y disminuyendo también de peso y de brillo por la tierra que necesariamente se le adhiere en el patio, lo que se podria remediar con facilidad haciendo esta operación de- bajo de un rancho entablado ó no. En la temperatura de 23° y á la altura de 500 varas, produce cada mata de café dos libras al año, unos con otros ; en los terrenos mas bajos con riego de una á una y media ; en la zona fria á la altura de 1,500 varas, media libra, y á 2,000 varas un cuarto de libra sola- mente; poro como las distancias respectivas van disminuyendo á proporción de la altura, de manera que en el último término la ar- boleda se pone á dos varas, cuando en el primero se puso de tres y media á cuatro resulta una producción semejante en una ostensión igual de terreno. Pin los terrenos bajos cálidos, secos y sin riego es muy variable la producción. El fruto tarda en madurar de cinco á seis meses desde la aparición de la flor, según la esposicion, los rie- gos y la vida de la planta cultivada con intelijencia en un buen suelo, con regular humedad, despojada constantemente de sus ramas secas y recortadas en sus épocas, en los periodos que marca su decaden- cia no conocemos su término , porque hay cafetales de mas de *70 años de edad y de 50 que se conservan fructificando con regularidad y que apenas han sido sembrados en su tercera parte. En un cuadro de 100 varas á 3 varas por hilera y á 4 de calle, caben 825 matas y es la siembra de la zona cálida y suelo fértil, que darán libra y media cada una. Plátano. M. D. — G. 448. — Además del plátano común, Musa paradisiaca, y del guineo, Musa sapientum, se cultiva en Jamaica el plátano tigre ó manchado M. maculata, y el plátano negro M. sylvestris; Lindley enumera hasta 10 especies de plátanos, de las cuales hay algunas que alcanzan hasta como 25 y 30 pies de alto ; pero la clase de mayor producto y valor es el que proviene de la DEL PLÁTANO. 465 Mítsa Cavendischii, (¿ue no alcanza mas de 4 á 5 pies de altura, se- gún dicen. El barón Ven Homboldt dice que un acre de tierra vuelto platanal produce casi 20 veces mas que igual terreno sembrado de trigo en Europa y que ningún vejetal de producto comestible; necesita me- nos cuidado j gastos menores de cultivo una vez sembrado en suelo feraz y á propósito; dice además que sus frutos contienen 44 veces mas sustancia nutritiva que las papas y 133 mas que el trigo, y que no paren en los sitios que se encuentran situados á una aítura ma- yor que 3,000 pies ó 1,000 metros por encima del nivel del mar y cuya temperatura media del año está mas baja que 68" de Farenlieít ó 20*^ centígrado : se ven sin embargo platanales á 4,600 pies de ele- vación producir frutos perfectos, pero eso depende mucho de su es- posicion : en la parte alta y íria de la isla de Puerto-Rico hemos visto platanales muy estensos njagníficos y dando maj'or producto, que en esa isla es el alimento casi esclusivo de la jente pobre y hasta poco acomodada : ayuda mucho á la manutención de la esclavitud. Cuanto mas cálida será la temperatura, la'planta será mas robusta, por consiguiente el fruto; así es que los plátanos de las costas del mar son los mejores. En una memoria leida delante del Instituto de Francia sobre ese vejetal, dijo el señor Boussingault : « El plátano es el fruto mas útil de la zona equatorial ; es el sustento de los habitantes de las rejio- nes cálidas. Entre los trópicos su cultivo es tan importante como lo es en las zonas templadas el de las gramíneas ó cereales y de las plantas farináceas. La facilidad de su cultivo, el poco espacio que ocupa, la seguridad y abundancia de las cosechas, la variedad de alimentos que el plátano procura según sus diferentes grados de madurez, hacen de este vejetal un objeto de admiración par-a el via- jero europeo. Bajo un clima en que el hombre necesita apenas ves- tirse y abrigarse, se le ve recojer sin trabajo un alimento tan abun- dante como sano y variado. Al cultivo del plátano se debe sin duda el proverbio que tantas veces he oido repetir por todas partes entre los trópicos : « ninguno se muere de hambre en América, » palabras consoladoras que jamás he visto desmentidas. En la choza mas po- bre se recibe hospitalidad y se da de comer al que tiene hambre.» Dice además que el plátano produce sobre el mismo e>pacio de tier- ra mas sustancia nutritiva que el árbol del sagú, que da 8,000 libras de harina al año en 4,020 metros cuadrados, pues que ha v^i^to un platanal producir por cada 100 metros cuadrados 1,233 libras de fruto. En una fanega de tierra, que son 10,000 varas cuadradas, y á 4 varas de distancia, caben 625 plátanos, que producen á los 10 á 12 meses de sembrados, -y que del segundo año en adelante producirán lo menos dos racimos por cada cepa, después de enceparse con los retoños y contando cada racimo unos con otros de 25 plátanos, re- sulta una producción de 1,210 racimos ó 31,250 plátanos, que u^ados como pan á 6 diarios por cada persona, proveerían de pan á 14 per- sonas anualmente, con la ventaja de preparar el pan sin mas bene- ficio que arrimar la fruta al fuego ; su conservación solo costaría 8 TOMO II 30 466 APÉNDICE 2". á 10 pesos, ó mejor dicho, nada cuesta á una familia campestre. Platanales liaj, dice Codazzi, de mas de 80 años, produciendo siem- pre con abundancia, sin que la mano del hombre les liaja hecho ningún beneficio, pues por su sombra j muchos renuevos no permite el plátano que se desarrollen otras plantas. Diremos aquí algunas palabras acercado las diferentes variedades ó especies de plátanos, tomando acerca del particular lo que dice don José A. Diaz : el plátano topocho ó variedad del plátano común ó musa del paraíso, parece tener medio término entre el plátano j el cambur morado ó musa color de rosa; se acerca al primero por el gusto de la fruta y al segundo en la robustez de la planta, en la fi- gura del cambur y la resistencia al tiempo seco. El topocho y el cambur morado se prefieren por esta última cualidad para levantar fundaciones de café de sequero. Pintón y maduro le comen bien las bestias, y maduro las gallinas, patos y pavos. El cambur morado di- fiere del topocho en el color de los tallos y la fruta que es del color que la califica. Su fruta es la mas propia para pasarla al sol ó pre- parar orejones. El plátano dominico es muy semejante al plátano común, tanto en la planta como en el fruto, aunque un poco mas pequeño : se produce en todas las zonas como el cambur. Cambur criollo ó pequeño : la planta es mas pequeña que la del morado y del plátano topocho y tiene el tallo manchado de puntos y vetas negras : el fruto, también mas pequeño, es mas agradable para comerlo crudo, y verde es el mas á propósito para la olla como re- cado. Cambur manzano: entre todas las especioso variedades este es el mas delicado : tiene los peciolos de las hojas y el tronco color de rosa, y las hojas mismas inclinan su verdor á este color; el fru- to, tan pequeño como el cambur criollo, y mas delicado, tiene un sabor especial. Cambur pigmeo : apenas crece la mata á la altura de 5 pies y el racimo es tan enorme, que descollando como los demás por la parte superior de la planta, á veces toca al suelo y necesita de una estaca para sostenerle, y el fruto es mayor que el del criollo y su gusto es semejante. El terreno mas á propósito para el cultivo de ese vejetal es una tierra vírjen recientemente desmontada, arcillosa y con mucho mantillo, pero cualquiera suelo de calidad regular, sea arcilloso, calcáreo, etc., ú otro, desde el momento que sea provisto de una fuerte capa de sustancias orgánicas en descomposición, es decir, de humus ó de mantillo, le convendrá bastante bien, especialmente siendo bastante húmedo. Siempre dará mayor producto en los ter- renos feraces, y allí el platanal puede durar hasta 20 y mas años, mientras que en las otras clases de suelos menos ricos dura sola- mente 7 á 8 años : le gusta un terreno un poco húmedo. Después de desmontado el terreno como lo tenemos dicho, limpiado y quemadas las malezas, yerbas malas, etc., se tiran líneas rectas con el cordel á lo largo de las cuales se hacen hoyos cuadrados como de pié y medio, distantes el uno del otro como de unas 8 varas y dentro de los cuales se coloca un hijo de plátano. Es preciso tener el platanal limpio de las yerbas y á los 12 meses ya la mayor parte de los pies dan producto; cuando se corta el racimo es preciso también cortar DEL PLÁTANO. 46*7 el tronco, á fin de que la cepa retoñe mas pronto: las mas Teces esos seudo-troncos y las hojas se dejan podrirse en el platanal para abo- narle, mientras que se les podria muy bien utilizar para el alimento del ganado en tiempo de escasez de yerba: de los peciolos de las ho- jas se sacan fibras finas que dan un hilo duradero. Para evitar la en- fermedad que ha destruido ese vejetal en algunos paises de América y especialmente en la Guyana inglesa algunos años hace, el señor A. Garnet aconseja cultivarle del modo siguiente: se prepara el terreno en acirates ó cuadrados largos, anchos como de unas 12 va- ras, separados los unos de los otros por zanjas hondas como de 30 pulgadas, ó como de una vara; después de dispuesto asíae siembran sobre cada vara cuadrada dos hileras de plátanos, de los que cada pié está distante de sus vecinos como de unos 18 pies ó como unas 6 varas y en quiconce, á fin de que haya una muy buena ventilación. El platanal así establecido se ha de dar una labor á la parte no sem- brada del suelo entre las líneas, con el azadón, y se le siembra de maiz, de ñames, de caña de azúcar, de frijoles, de yautias, etc., al- ternativamente. En la costa Este de Demerára, los platanales duran mas de 20 años en el mismo suelo, sin abono ninguno, algunas veces se le aplica cal, lo que hace mejor efecto, y han seguido así loza- nos, dando mucho producto y no han pasado ninguna enfermedad; lo mismo sucede en Puerto-Rico, como lo tenemos observado, y nunca se abonan los platanales; sin embargo, cuando se podrá pro- porcionar cal á precio barato ó fabricarla allí mismo, será muy bueno emplerala, porque sus propios detritus hacen con el tiempo el suelo agrio, lo que no es favorable para la vejetacion. Los renuevos, de cualquier tamaño que sean, constituyen la se- milla : se despegan los hijos de la madre con un chicuron ó con otro instrumento, por la parte de afuera y á flor de tierra; se separan y para trasplantarlos se les troncha por la mitad del mástil, pero no se han de sacar antes de la fructificación de la mata primitiva ó fundadora de la macolla, porque sufren mucho, tantos los hijos como la madre. Las cabezas de las plantas que ya están demasiado crecidas y que apuntan ya los retoños también, se sacan dividiéndo- las en tantas partes cuantas son las puntas que manifiestan los re- toños, y cada uno de aquellos pedazos se siembra : en cuanto á las cabezas y retoños se sembrarán los ojos á fior de tierra. Mientras el platanal es claro y nuevo cria yerbas y es necesario limpiarlo con el machete, pero después que está cerrado del segun- do año en adelante, apenas necesita un macaneo de machete que remueva la hojarasca y corte algunas yerbas que salgan, pero es necesario todos los años repasarle para quitarle las hojas y conchas secas, dos veces, una á entrada de aguas y otra á la entrada de nor- tes, la primera por abril y la segunda por setiembre. El primer año de la siembra puede aprovecharse la tierra con yuca, frijoles ó gar- banzos ó con una siembra de maiz. El platanal teme los vientos fuertes y la mucha sequedad y no tiene mas enemigos que las bes- tias, tanto vacunas como caballares, pues aun sus hojas no son muy 468 APÉNDICE 2*". apetecidas, sin embargo les place desgarrarlas y comerlas. Del)e estar pues bien cercado. Los plátanos verdes, cortados en pedacitos y desecados al sol, for- man un ramo de comercio de bastante consideración en algunas An- tillas, tales como Jamaica, especialmente cuando hay abundante cosecha de esa fruta, que por tal razón está muy barata en muchos lugares del interior de la isla de Puerto-Rico, en donde está baratí- sima, de tal manera que á veces se les emplea hasta para engordar los cerdos; se les podria aprovechar así hasta para la esportacion 6 para vender en la misma isla y de este modo sacar de ellos mayor utilidad. El plátano verde se debe cortar cuando ha llegado á su mayor tamaño y desarrollo, entonces quitada la corteza ó cascara, sea con la mano, sea mecánicamente, partidos en ruedas se les se- cará al sol del mismo modo empleado para el café ó el cacao, ó qui- zás mejor á favor de una estufa dispuesta á propósito, especialmente si se tenia que trabajar en escala mayor: así secos se pulverizarán y se pasará el polvo por una criva, entonces se habrán vuelto har- na de plátano, llamado coqvAíi tay en Jamaica; en tal estado ha ad- quirido una fragancia particular parecida á la del heno fresco ó del té de la China. Bien preparada y bien seca se podria quizás hacer entrar en la alimentación europea y llegada á Europa se la volverla mas ftna moliéndola de nuevo mecánicamente y pasándola por ta- mices á propósito. El aroma de ese producto depende del cuidado y de la prontitud con que se han preparado y desecado los frutos; por esta razón tal operación no se debe hacer sino con tiempo seco y en el caso contrario ha de valerse del horno ó de la esLufa, según la cantidad mayor ó menor que se ha de preparar: su color es siem- pre dañado por los instrumentos de hierro ó de acero que suelen usarse para descascarar y cortar el fruto y para moler y tamizar la harina, por esta razón seria mejor emplear útiles de niquel ó de aluminio: las cribas de alambres de cobre bien estañado serian á propósito: si se plantaba una fábrica en escala mayor habria de va- lerse de una máquina muy sencilla establecida sobre el mismo prin- cipio que la con que se parten en Europa los nabos y las zanahorias destinadas para el alimento de los animales, y se sacarla también la cascara mecánicamente : de esa manera saldría el producto mu- cho mas barato y por consiguiente dejaría mayor utilidad. Yuquilla-maranta. — Maranta arundinacea ó indica. C. T. V. N° 198. — El cultivo de tales vejetales da mucho provecho para el que dedica á él solamente algunos acres de tierra, 3 ó 4, verbigra- cia; en efecto, puede sacar de su trabajo como unos 85 pesos, algo mas ó menos, término medio. Conviene mucho á ese cultivo un suelo colorado y rico, abundantemente abonado : el estiércol es el abono que mejor le favorece y después de él vienen las plantas marinas ó basuras del mar, formadas de algunas clases de algas ó fucos que se han de emplear, el agua de mar que las moja, no escurrida to- davía, cuando es posible hacerlo así : se las entierra en el suelo en los lugares correspondientes con los hoyos, es mejor estender el abono sobre el terreno y darle la labor inmediatamente. La mejor estación para la siembra de esa vianda es el mes de DEL LAIKEN. — DE LA AKACACHA. 469 abril, pero se la puede sembrar desde marzo hasta mayo, antes de la Noel está espuerta á no salir tan buena : tal cultivo se hace de dos modos, sea escarvando hoj'os con el azadón ó bien abriendo surcos con el arado en un terreno abonado y preparado como conviene : tales surcos, abiertos en línea recta como á2 pies de intervalo v los Jioyos pequeños hechos dentro de ellos con un piquete ó con un plan- tador, di>tantes los unos de los otros como de unas 6 pulgadas, colo- cando en cada uno de ellos un hijo fuerte ó dos chiquitos, y se les tapa con un poco de tierra bien desmenuzada : en la primavera se debe desyerbar con la mano, porque de otro modo se podria cortar ó dañar alguna matita, que después no volvería tan vigorosa como antes. Necesitando un año para madurar sus tubérculos, se puede sembrar con e^e vejetal papas, onion, sandías ó maiz, pero aquel último al parir no es muy favorable al plantío de yuquilla-, mientras que fccrá el contrario si se le corta verde para forraje. Se conoce que está bueno para cosechar en que sus hojas se marchitan, se vuelven amarillentas y se desprenden del tallo, lo que sucede á los 10 ó 12 meses de sembrados los hijos ; entonces se arrancan los tu- bérculos con el azadón, se deben limpiar de la tierra adlierente con ellos, así como de las raices y de feu corteza, antes de elaborar la yuquilla ó arrow-root , que se prepara con mayor escala y con mucho provecho en la isla de San Vicente y con método perfeccio- nado y máquinas á propósito. El lairen ó lleren, C. T. V, N° 199. — Se cultivará del mismo modo y en los mismos terrenos; se reproduce de los mismos tubér- culos, como las papas, y será uno de los recursos para suplir el pan en caso de escasez, se le debe pues cultivar. El capacho. — Canna edulis , coccínea, acliiras y glauca. (Véase C. T. V. N° 200. — Tales vejetales. que se cultivan en escala muy regularen las islas francesas, en Baríjada y en San Cristóbal, sumi- nistran una clase de yuquilla ó arrow-root, llamada tous les mois en el comercio, que le aprecia mucho. Producen tubérculos bastante gruesos, que á veces alcanzan ha!:ta el tamaño de la cabeza de un niño. Necesitan para su cultivo, que se hace como lo tenemos indi- cado para la maranta, terrenos feraces y muy ricos, y entonces su tallo alcanza ha^ta unos 12 á 14 pies de altura. Aracacha ó apio de América. C. T. V. N" 214. — Este vejetal re- quiere un terreno negro, suelto y profundo, que se preste al de^ar- rollo de su raiz: para propagarle se corta en pedazos la cabeza de la raiz, de manera que quede á cada uno un ojo ó yema y plantándolos así separadamente. La estación propia de ios terrenos naturales de sequío es en las dos primaveras de mayo y de octubre, y en las de labor y riego se puede sembrar en todo el año, manteniendo la planta muy bien aseada, regada y amurillada, como planta jardine- ra : después de tres ó cuatro meses de vejetacion las raices están bastante desarrolladas para usarlas en la cocina; si se les deja mas tiempo adquieren mayor volumen, sin perder nada de su sabor. Las aracachas, como las papas, jio prosperan en los lugares muy cálidos, mientras que en los templados se producen regulares y mucho me- jor en los frios ó á una temperatura de 15 á IT" centígrado. Puede 470 APÉNDICE 2". cultivarse desde las 500 varas, aunque con poca utilidad, j desde aquí se va mejorando gradualmente en su ascenso, siendo el terreno suelto, cargado de humus j bien removido. Ñames. C. T. V. 189-190. — Les haj colorado, negro, blanco j criollo, suministrados por la Dioscorea triphylla; el ñame de Gui- nea proviene de la Dioscorea aculeata; el de la Barbada de la i>. alata; el común de la D. sativa, etc. Esos vejetales, cuyo cultivo es muv sencillo, se acomodan mejor de un suelo liviano, rico ó arenoso bien abonado con estiércol ó demás sustancias orgánicas vejetales en descomposición que se meten en el hoyo hecho á propósito y por encima se amontona la tierra como de pié á pié v medio de alto, á fin que la raiz perpendicular que ha de volverse tuberculosa tenga mayor facilidad para desarrollarse y echar sus raicillas ; se siembra un pedacito de tubérculo en un hoyito hecho en la parte superior del montoncito, se le tapa con dos ó tres pulgadas de tierra y se co- loca una ó dos estacas para que sus tallos se puedan enredar y se queden así sostenidos; los pies se colocan ordinariamente como á una, dos ó tres varas de intervalo el uno del otro y según el cultivo accesorio que se quiera juntar con el primero. Los ñames de Indias, de Barbada y el colorado se han de sembrar en mavo v se cosechan en enero siguiente; si al arrancarlos no han sido lastimados los tu- bérculos amontonados con cenizas y bien envueltos en ella se pueden conservar buenos en un sitio seco ; los primeros como nueve meses y los segundos como 12 y por consiguiente esportarse con facilidad embarrilados con ceniza y polvo de carbón. Los ñames de Guinea y el portugués se han de sembrar en enero y se arrancan en setiem- bre, mientras el criollo y los malangas se cosechan en enero y las batatas sembradas con ellos desde enero hasta marzo. Se puede sacar de todas las clases de ñame y especialmente de la variedad Bucliyam de los Ingleses, una fécula de calidad superior ; esta última clase, criada en un suelo rico y bien liviano, es tan bue- na y tan harinosa como las batatas, pero tiene el inconveniente de no poder conservarse sino poco tiempo, y por tal razón no se puede esportar sino después de partida en ruedas y desecada. Ün acre de tierra sembrado de ñames y de batatas á la vez en ter- reno á propósito abonado como conviene, es capaz de producir 4 1|2 toneladas de cada clase de tubérculos en el intervalo de 12 meses, lo que hace 9 toneladas de ambas raices, producto magnífico. Yautia, malanga, tanias, taro^ etc. Arum esculentMmj Colocasia, etc. Véase C. T. V., núm. 174. — Esos vejetales, bien que de buen producto, no han sido cultivados en escala mayor ; sin embargo, en las Islas francesas se siembran para dejar descansar el suelo des- pués de arrancadas las cañas, y esa vianda sirve para la manuten- ción de la clase laboriosa y poco acomodada, y por consiguiente es muy poco apreciada de los ricos que apenas la utilizan, aunque seria de mucho provecho para los hacendados que tienen que mantener un numeroso peonaje; además ese vejetal no encontrándose perju- dicado ni por la seca, ni por la humedad tampoco, ni por ninguna otra cosa que arruina y destruye los platanales, batatales y las se- menteras de maiz será siempre prudente y títil tenerle al menos co- DE LAS BATATAS. 471 mo cultivo secundario, á fin de que supla á las otras viandas si por acaso faltasen ó que su producto saliera escaso. Todos los suelos con- vienen á tal cultivo, y especialmente un terreno liviano algo are- noso V algo húmedo á la vez, sin serlo demasiado sin embargo ; se le siembra raras veces solo, pero de ordinario junto con los demás ve- jetales alimenticios; su cultivo es sencillísimo; en efecto, basta ha- cer en el terreno destinado para los hoyos como de un pié cuadrado y otro tanto de hondo y colocar en esa tierra bien desmenuzada unos dos ó tres hijitos distantes de como 6 pulgadas el uno del otro y triangularmente puestos , tapándoles con unas cuatro pulgadas de tierra ; tales hijos han de estar como á tres pies y algo mas los unos de los otros por causa de sus grandísimas hojas ; cuando se siembra como cultivo secundario, entonces se esparcen las cepas por el cam- po de manera que su sombra no*puede perjudicar á los vejetales con que se le junta, y será bueno escojer siempre aquellos cuyos tallos crecen mucho mas altos que él, tales cómelos ñames, plátanos, maiz, etc. Principia á dar producto á los trece ó catorce meses de sem- brado y la misma planta puede, con un poco de cuidado y el cultivo mas sencillo, dar dos y hasta tres cosechas al año; basta para eso sacar con cuidado los tubérculos maduros ó llegados á su tamaño, de manera á no lastimar los hijitos y bien arreglar el suelo después de esta operación. Ese vejetal esperimentó en Jamaica, algunos años hace, una enfermedad análoga á la que en Europa acometió á las papas y por poco acabó con ese cultivo. Un solo hombre trabajando durante como unos 15 días puede cul- tivar una cantidad suficiente de esa vianda sembrada en un suelo á propósito para la manutención de seis á siete de familia. Por tal ra- zón, después de la emancipación de la esclavitud en las Islas ingle- sas y francesas también, muchos negros han sostenido su vida y la de su familia con ese alimento único, porque entonces no miraban la libertad que hablan recibido sino como el medio de no trabajar y de entregarte á su apatía, abandono y pereza naturales. Batatas. C. T. V. núm. 210. — Ese cultivo se hace en escala ma- yor en las Antillas, en donde se aprecia mucho; tal vianda, que se come con abundancia y casi únicamente en algunos lugares por la gente pobre y poco acomodada, también se pone en la mesa de los ricos, que no la desprecian. Los terrenos mas á propósito para tal cultivo han de ser de clase liviana y arenosa con mantillo rico, des- menuzable y negro, ó un sub-suelo pedragoso; se crian muy bien en las pendientes de las colinas, en las orillas de las quebradas pe- dragosas y hasta en los lugares estériles y casi hasta inútiles para otra clase de cultura; sin embargo, será siempre bueno abonar los suelos pobres que se dedican para ese cultivo, del modo ya indicado mas económico con los abonos verdes, las plantas marinas ó basura del mar, las que se crian en las sanitrales, las malezas herbáceas, etc., puestas en el suelo con abundancia le convienen mucho. Para sembrar tal vejetal se han de hacer surcos con el arado pequeño, cuando la naturaleza del terreno lo permite, en línea recta y como á una vara de intervalo y la semilla se coloca como á un pié de dis- tancia una de otra, y los mejores tubérculos para siembra son los de 472 APÉNDICE 2". á 8 ó á 12 por libra; si pertenecen á la clase blanca y de tallo ende- rezado, se ha de arrancarlos al principio de marzo y tenerlos guar- dados aM' durante un mes, á fin de que se sequen un poco antes de enti'egarlos á la tierra; pero se emplean para propagarlas ordinaria- mente los bejucos que han de proporcionarse mas vigorosos y mas recientes ó íre&cos posible y bastante largos para que tengan seis nudos, de los cuales tres ó cuatro se colocan en la tierra preparada como conviene, mientras dos se quedan con sus hojas por afuera del suelo ; los surcos abiertos en el terreno abonado y bien preparado con labores anteriores se les meterá en la tierra, á un pié de inter- valo el uno del otro; tales surcos se deben hacer en tiempo seco, y si durante ese trabajo el tiempo se pusiera lluvioso, no se deberla demorar la siembra que se habría de efectuarlo mas pronto po&ible ; se puede sembrar mucho en el intefvalo de un dia; la estación me- jor para la siembra principia á fines de agosto hasta principios de setiembre. Algunos dicen que quitando las flores, los tubérculos se criarian mucho mavores. Yuca dulce y brava. — JairopTia Loeflengii^ y /. manihot. M. D. — G. 135. — Un suelo seco y mezclado es el mas á propósito para el cultivo de esos vejetales, que prosperan sin embargo en el suelo mas pobi^e, de tal suerte que en Puerto-Rico se suelen dedicar los arenales pai'a esa cultura que da mucha utilidad ; si el terreno em- pleado estaba húmedo, seria preciso, para tener la cosecha buena y abundante, desaguarle por medio de zanjas buenas hechas á propó- sito. Tales vejetales estenuan bastante el teiTeno para no cultivar- les mas de dos á tres veces de seguido en el mismo lugar, y se sa- carla biempre ma^or provecho de esa cultura haciéndola alternar con otras y abonando el terreno con abonos verdes ó con sustancias vejetales en descomposición y prontas para volverse humus ó man- tillo, que le conviene mucho. Se puede cultivarla hasta la altura de 3,200 pies por encima del nivel del mar, y se dice que un acre de tierra semb/ado de vuca brava da tanta sustancia nutritiva como seis acres de trigo en Europa ; para los indios y los negros esa vian- da reemplaza muy bien los cereales. Se necesita muy poco gasto y poco trabcijo para plantar un yucal de alguna ostensión; en efecto, basta, después de limpiado el terreno como conviene, hacer con el azadón ho3^os cuadrados como de un pié de largo y de otro tanto de hondo. Guarnecidas de mantillo ú otro abono puesto en su parte su- perior que se queda abierta; dispuestos así se colocan dentro de cada uno de ellos, distantes como una var^a el uno del otro, dos ó cuatro estacas que se sacan de los tallos en completa vejetacion y se les lapa con dos ó tres pulgadas de tierra; se debe escojer para esa siembra el principio de la estación de las lluvias. Basta entonces desyerbar de cuando en cuando, hasta que ha3'a alcanzado la al- tura ordinaria; al primer desyerbo se aporca un poco, y después se amontonan las yerbas al pié de cada mata para servirle de abono; mejor seria enterrarlas en derredor con cuidado para no lastimar las raices; álos ocho ó nueve meses por lo regular, los tubérculos ya han llegado á su madurez y están buenos para arrancar ó. cosechar, pero se pueden quedar mas tiempo en la tierra sin perjudicarse. DE LAS HABICHUELAS Y FRIJOLES. 473 Se eiíporta de la isla de Sta. Lucia mucha harina de manihot, de casabe y de tapioca, así como de las Islas francesas ; se cultiva tam- bién en Puerto-Rico esas viandas en escala regular y se fabrica ca- sabe especialmente, que se vende en el pais sin esportarla afuera ; pero los medios empleados para tal operación necesitarían perfec- cionarse mucho, y se habrían de aplicar á esa industria maquinarias á propósito, si se quisiera plantarla en escala mayor y con econo- mía, á fin de sacar mas utilidad de ella. Pocos años hace, el señor James Glen ha puesto en la jjacienda Hagobrh, en Demerara, una maquinaria con el objeto de elaborar almidón de yuca brava y ha enviado ese artículo á Inglaterra por cantidades considerables, en donde se le ha pagado un precio tal, que le dejaba una utilidad ma- yor que el cultivo de la caña de azúcar. En Essequibo, un acre de tierra buena, arenosa y permeable ha producido 25 toneladas de yuca verde, lo que es maravilloso. Se cultiva muchísimo en la Gu- yana, en donde el casabe es el único pan de la gente poco acomoda- da, de todos los del campo y de los indios. Diremos pues que por el poco costo de su cultivo y.por la mayor utilidad que deja el producto que de él se saca, conviene mucho ese cultivo á los que pai'a traba- jar tienen un capital corto. Heliant lilis tiiherosus. Ese vejetal , que es natural del Brasil, se puede cultivar con provecho en las Antillas, en donde se cria per- fectamente bien y suministra muchos tubérculos muy buenos para comer y bastante alimenticios; se sembrarán hijos en un terreno bien rico y como arcilloso rojo, ni seco, ni húmedo ; es mas cultivo de jardín ó en corta que en mayor escala y á los 6 meses de sem- brado se puede cosechar. Frijoles. M. D. — G. 10'/7. — Los frijoles y las habichuelas, las caráotas, no se cultivan en escala mayor en las Antillas, y sin em- bargo seria mu}' provechoso hacerlo así, porque no solo se gasta muy poco para su cultivo y que deja bastante utilidad, sino que tam- bién por la razón que constituyen un alimento muy rico en ázoe, y por consiguiente muy á propósito para la manutención de la gente pobre ó poco acomadada que vive casi esclusivamente de vejetales feculentos y de bacalao, casi sin comer nunca carne ninguna que reemplazarían hasta cierto punto. Además esos vejetales sacando mucho de la atmósfera dejan en el suelo con sus raices y demás des- pojos casi tanto cuanto han sacado de él, de tal manera que su cul- tura necesitará muy poco abono; se les utiliza también con muchí- simo provecho para abono verde, como lo tenemos ya señalaéo mas arriba, páj. 431. Se siembran en líneas rectas, después de haber dado tres labores al suelo que ha de ser rico ó bien abonado con es- tiércol y bien desmenuzado, al principiar la estación de las lluvias ó desde mayo. Tales líneas han de estar dictantes las unas de las otras como de 0,30 m. á 0,40 m., ó como 10 pulgadas ha^ta un pié ó algo mas 14 pulgadas, y cada niataá 0,15 m. ó 0,20 m. la una de las otras á lo largo de la hilera, ó 5 á 7 pulgadas ; cuando el vejetal habrá ya alcanzado como 0,06 m. á0,ü8m. de alto, ó tendrá de tresá cuatro pulgadas se desyerba el terreno y se le aporca lijcramente; se debe volver á binar y á aporcar el plantío cuando las matas es- 474 APÉNDICE 2**. tan para echar las flores; en fin se les bina por la última vez como tres semanas después. Cada vez que el suelo estará desecado hasta como á tres pulgadas de profundidad, será muy bueno y muy ven- tajoso regarles por infiltración, introduciendo el agua en las regue- ras ó surcos que se encuentran entre las líneas y que provienen de las operaciones del binar y aporcar las matas; en fin, la cosecha se hará arrancando á la mano las matas por tiempo seco, y cuando la mayor parte de las vainas se hallarán maduras ; se limpian las ma- tas así arrancadas de las pocas hojas que adhieren todavía y de las partes demasiado verdes; se las reúne en paquetitos ó manojos que después de atados se cuelgan de pértigas dispuestas á propósito en un rancho ó tinglado para que se sequen con facilidad; su esposicion al sol durante algunas horas antes de sacarlas para sacar las semi- llas. Se admite que para conseguir una cosecha abundante de ese cultivo se consume bastante abono; en efecto 100 kilogramos de se- millas y paja junta cosechados han gastado, según los esperimentos hechos con cuidado, 367 kilogramos de abono normal, lo que corres- ponde como á 16,000 kilogramos por cada hectárea; al parecer del agrónomo Crud, ese cultivo, al contrario, estenua poco el suelo. Los garbanzos no se han cultivado en las Antillas, hasta ahora, en escala mayor. Su cultivo es semejante al de las caráotas y frijoles en los terrenos naturales de montaña ó rastrojo, si se quiere hacer una siembra formal. En los terrenos de labor, después de haberlos abonado suficientemente y haberles dado dos rejas, al dar la última una mujer ó un muchacho va detras del arado, sembrando en el ca- nal de los surcos, dejando caer los granos, al paso que va caminan- do, uno á uno ó dos á dos, sin cuidar de las distancias ; concluida la siembra, se pasa la grada para que el suelo quede igual y Ja semilla cubierta. Durante el incremento de la planta, se le dará uno ó dos desyerbos aporcados, y cuando se empiecen á marchitar las matas y las vainas, ó á ponerse amarillas, se arrancarán de raiz como las caráotas, se secarán y entrojarán del mismo modo para desgranar- las. Las bestias comen bien la paja, pero es preciso dársela con eco- nomía y mezclada con la de arroz, porque es muy cálida y puede darles toroson, lo que sucede con el maiz crudo, cuando se les da con esceso ó que tienen sed. Guaracaros. — Labial viügaris. — Pois souche. M. D. — G. 1,070. — Se siembras como las caráotas , pero á la distancia de una vara por la hilera y vara y media de calle, teniendo cuidado de clavar al lado de cada planta una estaca que sobresalga, y dos varas ó mejor una rama seca que tenga algunas horquitas; se aprovecharán los claros con una calle de maiz y otra de frijoles alternadas. La siem- bra se hará precisamente en agosto y á la vez los frijoles para cose- charlos antes de las lluvias de noviembre, tan perjudiciales para ese fruto. Se cosechan como el frijol, porque sus fiores y semillas vienen alternativamente, y se secan, guardan y desgranan del mismo mo- do. En todos estos granos, los mejores para las semillas son los que se caen espontáneamente en el patio donde se secan ó en el granero en que se guardan, porque son los que se desprenden de las vainas mas sazonadas, las cuales revientan por sí solas. En cuanto al maíz. DEL COCO. 457 no se debe sembrar antes ele octubre ; como el maíz crece con rapi- dez j que para entonces el guaracaro está desplegando sus rejos, es necesario pasear la siembra para guiar los tallos que se desvian de su apoyo, asiéndose del maiz naciente como de los frijoles ya avan- zados, porque los sofocarían. Coco, palma de coco. — Cocos micifera. M. D. — G. 91. — Ese vejetal necesita, según Marschal, para vejetar con lozanía y dar mayor producto, una temperatura media que no baje de "72° furen- heit, ó -f-22° 3 c. centígrados ; un terreno húmedo, arenoso y mas ó menos rico, pero especialmente situado lo mas cerca posible de las orillas del mar, y hasta en los sanitrales ó arenales mas ó menos bañados por sus aguas ; tal árbol principia á parir como á los 4 ó 5 años y sigue así durante 80 y 100 años, y puede alcanzar como unas 25 ó 30 varas de alto ; á los 8 ó 10 años ya es de buen producto en los suelos buenos ó que convienen mejor á ese cultivo. En los suelos, al contrario demasiado secos y mas apartados de las orillas del mar, no principian á echar flores sino á los diez años y algunas ve- ces mas tarde. Sin embargo se puede cultivar, mas con mucho me- nos provecho, hasta la altura de 500 varas. En Caracas echan sus frutos, pero sin comida, y por consiguiente son imperfectos é inúti- les. Lo hemos hallado lozano y bien productivo en las misiones de bajo Orinoco, á como 50 leguas del mar, en los alrededores de An- gostura ó ciudad de Bolívar, á como 80 leguas del mar y hasta en San Fernando de Apure, como 120 leguas de la embocadura del Ori- noco. En los terrenos á propósito está produciendo anualmente 100 cocos hasta 40 ó 50 años, pero desde esta edad empieza á decaer gradualmente su producción, pero nunca se esteriliza enteramente aun en la mas avanzada. El abono mas conveniente á ese cultivo es las cenizas, el pescado salado podrido y que ya no puede aprovecharse para la alimenta- ción ; el lodo salado y las basuras del mar ó algas empapadas de agua salada. El terreno escojido mas á propósito posible, es decir á las orillas del mar, si se puede algo húmedo ó que se pueda regar con agua salada, se principia por limpiarle de las yerbas y arbustos que después de amontonadas y desecadas al sol se queman, conser- vando las cenizas para echar en los hoyos en el momento de la siem- bra, los cuales se harán en línea recta como á 9 ó 13 varas de intervalo por todos lados, según el terreno será masó menos conve- niente, para ese cultivo, lo que dará como 58 palmas en el primer caso y solamente 44 en el segundo por acre de tierra, y se colocarán en ella los cocos sacados del semillero; antes se suele echar en el fondo del hoyo un puñado de sal; las algas ó basuras del mar, á nuestro parecer, son mas útiles y saldrían mucho mejor ; se les pue- de echar en tierra á mediados ó á fines de enero, cuando el semi- llero se formó en octubre ó en noviembre, y en octubre cuando se le hizo en junio; durante los dos primeros años de sembrados es muy conveniente abonar el suelo y sus alrededores con lodo salado, cuando se puede proporcionarlo con facilidad y á poco costo, ó bien con plantas marinas ó basuras del mar en los lugares en donde la mar les amontona en sus orillas ; se debe además tener el cocal lim- 476 APÉNDICE 2*". pió de las yerbas, de los bejucos y de los arbustos, á fin de que reci- ba bastante aire, y seguir así hasta que estén suficiente crecidos los cocoteros para no sufrir ningún perjuicio de las yerbas y arbustos que pronto catarán ahogados y después se quedará por debajo de ellos un pasto muy regular que se utilizará con ventaja. Entonces no habrá mas cuidado que el de cosechar los frutos maduros, car- garlos en los establecimientos y elaborar el aceite. Una palma de coco echa un racimo cada mes y tiene por consi- guiente siempre frutos maduros y secos que cojer, frutos verdes y flores', produce pues en termino medio al año unos 80 á 100 cocos, de los cuales un ciento da, estraido como conviene, á lo menos 2 1[2 galones de aceite. Si el cocal tuviera por ejemplo 100 acres de ter- reno contendría en el primer caso 5,800 palmas, y en el secundo so- lamente 4,400 que, á 50 cocos cada pié en término medio, darán al año 290,000 á 220,000 nueces, que suministrarán, á 2 li2 galones el 100, como "7,250 á 5,500 galones de aceite que, calculados solamente á como 5 0 0 reales cada galón, libres de gastos, dan 5,435,50 pesos á 4,468; pero si por otra parte, en lugar de producir 50 nueces, tér- mino medio, cada palma pare hasta 80, como sucede las mas ve- ces á los' cocales, cuyo terreno es á propósito y situado á las orillas del mar, con irrigaciones bastantes, entonces la utilidad será mu- cho ma^'or, y si los establecimientos están planteados como conviene para la mejor fabricación posible ; además habrá que tenerse en cuenta el azúcar que se podrá sacar del agua contenida en las nueces al abrirlas ó del alcohol que provendrá de su fermentación : el ba- gazo ó panac, que es el residuo que queda después de la estraccion del aceite que se evalúa como á 1{4 de libra por cada nuez, ó sea quizás algo menos, y que se utiliza para alimentar y hasta para ce- bar cualquiera clase de animales, sea para abonar los terrenos, co- mo ya lo tenemos señalado mas arriba, páj. 458, y se puede evaluar como á unos 50 pesos la tonelada ó quizás á nuestro parecer algo menos, pero que pagará casi el costo de la elaboración del aceite ([ue se vende muy bien en Inglaterra, en donde se le podrá mandar después de preparado como conviene ; el valor de la parte fibrosa sacada por medio de la fermentación de la concha, después de qui- tado el casco, que también se puede aprovechar y que se podrá mandar á Europa en forma de hilo ó de estopa, como se hace en Ceylan, de donde se esporta para Inglaterra tal producto, bajo for- ma de cuerdas, de hilo y de estopa, en escala mayor, y deja bastante utilidad. Cuando se trata de plantear un cocal suele principiarse pordispo- ner un semillero, lo que se hará de la manera siguiente : se colocan los cocos maduros y secos en el suelo por cuadrados dea 400 y se les cubre con una capa de arena ó de lodo salado espesa como de 1 á 2 pulgadas, con el cuidado de regarlos diariamente hasta que revien- ten, lo que sucederá á los tres meses en un suelo propio y á las ori- llas del mar, pero en el interior y á mayor altura tardará 4 á 6 me- ses su germinación. Al aparecer la yema por afuera, serán buenos para sembrar cuando se quiera, pero quizás mejor será esperar á que tengan media vara fuera de tierra y tres á cuatro hojas. Se deben DEL COCO. 477 escojer para semilla los cocos secos, perfectamente madurosy caídos naturalmente. Los semilleros se establecen sea en junio, sea en oc- tubreóen noviembre. En lai>sladeCeylan, en donde haytantos cocales hermosísimos, no se suelen formar semilleros, pero después de es- cojido el terreno, haberle limpiado como conviene, se esparcen en el suelo cocos maduros y se les abona, así siguen todos los periodos de su germinación, se desarrollan y crecen sin otro cuidado y á los cinco años principian á parir. Se podrá también sembrarlos así en las Antillas, pero á nuestro parecer seria bueno y muy conveniente, después de limpiado el suelo como lo tenemos dicho, disponer hoyos apenas hondos de como tres á cuatro pulgadas y solamente del ta- maño de los cocos y en línea recta y distantes los unos de los otros como lo tenemos dicho mas arriba, con cuidado de cubrirlos con una capa de lodo salado ó de arena, dándoles agua con frecuencia y des- yerbando cuando habrán reventado y según será necesario y cui- dando el cocal como lo hemos dicho mas arriba, y ese método muy poco costoso saldría muy bien. Se pueden además cultivar frutos menores en el cocal, porque la desnudez de los altos estipes y lo esparcido de sus frondes ú hojas ni dan una sombra que lo impida ni privan las plantas del aire ne- cesario. Así es que no hay dificultad en que pudiera hacerse en ei cocal, cuyas matas están á 8 varas de distancia, una plantación de café, con tal que se le podría regar en el caso que faltasen las llu- vias en la época perentoria y decisiva para asegurar la cosecha : en este caso se conseguirá cultivar dos haciendas en un mismo terreno igualmente productivas. El café debe seguir la misma ahiladura de los cocos á la distancia de tres varas y media por medio de las calles vacías, y un cuadro de tierra de 100 varas á 1,000 varas cuadradas contendrá además de 164 matas de coco ahiladas al cuadro ó 184 al triángulo, 890 matas de café ; las cuales cuidadas y regadas oportu- nadamente deben producir 13 quintales de ese fruto, que dejará un producto líquido de 91 pesos, que, unidos á los 280 proviniendo de los cocos, de manera que el cuadro así plantado de coco y café pro- ducirá 371 pesos anualmente. Como todos los cocos no maduran á la vez en cada racimo, no se debe esperar que caiga espontáneamente porque para alguno de sus usos no son á propósito en toda su madu- rez, hay que trepar al árbol para descargarlo; pero para ese trabajo bastarán 5 tareas mensualmente ó el gasto de 31 pesos al año y siempre resultará un producto líquido de 350 pesos. En las Indias Orientales además de estraer el aceite de la carne ó almendra de coco separada del casco que la contiene, suele hacerse desecar al sol, en cuyo estado la llaman crypperah, que los maleses, coolies y demás naturales utilizan por alimento, y además se saca de él con mayor facilidad un aceite de bastante valor }' que se pide mucho para varios objetos en Inglaterra, ó se manda el copperah á Europa en, donde se vende muy bien para estraer aceite de él, lo que se hace con mayor facilidad y casi sin gasto, pues que la prensa mas sencilla y puesta en acción con un buey basta: el único cuidado que se necesita consiste en que la presión esté lenta y graduada, á fin de que el aceite al salir lleve consigo la menos cantidad posible 478 APÉNDICE 2o. de pulpa. Para preparar éicopperah, después de sacada la carne del coco y de partida en pedacitos, se la espone al sol colocada sobre esteras á propósito hasta que se haya vuelto rancia, muy blanda y semilíquida, se la embarilla así para la esportacion, que se hace en escala muy regular enCeylan,pues que en el año de 1852 se manda- ron 13,325 quintales ingleses, que son 112,000 libras, de ese pro- ducto á Inglaterra, y dejó muy buena utilidad. A nuestro parecer, seria muy provechoso preparar en las Antillas el coi^j^erali para la esportacion, porque eso se haria casi sin costo ninguno, economi- zando así la mano de obra necesaria para la estraccion del aceite y las máquinas á propósito. Cuando se quiera trabajar en escala ma- yor, nos parece que seria bueno no limitarse á la esposicion al sol, pero disponer secadores de cajón que, vueltos en su lugar de noche ó cuando el tiempo no estarla á propósito, podrían gozar el beneficio de una estufa dispuesta á propósito, cuyo calor así empleado acorta- rla mucho el tiempo necesario para esta preparación, que se podría hacer además en cualquiera estación y por cualquier tiempo y de un modo continuo. Para el comercio el aceite se estrae, en las Indias Orientales, so- lamente del copperali, por mas económico y el que se prepara por el método de la ebullición, como lo tenemos ya señalado en la parte medica de esta obra sirve únicamente para comer. En Puerto-Rico, ese aceite se estrae únicamente por la ebullición ; en la isla de Tri- nidad, en donde hay cocales de consideración, costa Este, cuya ma- yor parte pertenece á la Corona, se emplean medios mecánicos pero poco perfeccionados, mientras en los demás se le saca con métodos muy atrasados y muy poco productivos; á nuestro parecer seria muy ventajoso emplear prensas fuertes y especialmente hidráulicas, porque no solo darían un producto mas abundante, sino también porque el panac ó bagazo, vuelto entonces como un pedazo de ma- dera casi enteramente desprovisto de humedad y de aceite y conte- niendo casi únicamente las demás sustancias orgánicas sólidas, se conservaría perfectamente mucho tiempo sin alterarse y seria mu- cho mejor j mas saludable para el alimento de los animales que el que se encuentra ordinariamente en el comercio húmedo y fermen- tando, por no decir medio podrido, que hiede muchísimo y bastantes veces pone enfermos á las animales que se le comen. El enemigo de los cocales es un coleóptero, el orcytis rhmoceros, que, penetrando por el cogollo en el tronco y viviendo á espensas de su médula, acaba con el árbol cuyas hojas se vuelven amarillas y se muere. Unos cinco á seis años hace que las palmas de coco han sido acometidas en las Antillas por un sinnúmero de insectos de la clase ¿e las cochenillas y que han hecho perecer muchísimos árboles ; á nuestro parecer, cuando una palma está atacada por esa plaga es preciso cortar las pencas enfermas, quemarlas, así como las yerbas del cocal y pasar sobre los árboles una mano de la composición si- guiente : cal no carbonatada, agua y azufre en polvo. Higuereta, ricino. — Ricinus communis. C. T. V.: 503. — Bien que este vejetal sea natural de las Antillas, muy raras veces se ha cultivado en ellas en escala mayor, pero casi siempre como cultivo DEL maní. 479 secundario ; los terrenos arenosos j de aluvión son los que convie- nen mejor á su cultura, y las mas veces se ve á ese vejetal salir es- pontáneo en tales lugares sin necesidad de ningún cuidado. Las semillas pueden sembrarse en setiembre, distantes las unas de las otras como de 10 á 12 pies j en línea recta con un intervalo de 3 á 4 varas entre ellas. Después de haber preparado el terreno como conviene, con una labor; después de desyerbado y de quemadas las basuras, será bueno volver á limpiar el plantío de las yerbas cuando la siembra habrá echado su tercera ó cuarta hoja, á fin que no esté ahogada; ya parirá en la estación siguiente y seguirá pariendo todo el año durante cuatro años consecutivos. Al año de sembrado se po- drá muy bien sembrar otro vejetal que siendo mas bajo que él dará producto sin hacerle perjuicio ; las batatas, los manis, el ajonjolí y demás vejetales que gustan de igual suelo y que á la vez serán para él \in abono. Al madurarse las semillas se vuelven parduzcas mas ó menos, según la clase, y entonces se ha de recojerlas, cuando la es- piga ó racimo que las lleva está seco y sus cápsulas prontas para abrirse naturalmente. Un acre de tierra sembrado con ese vejetal ó vuelto ricinal, produce al año 100 almudes de semillas, y cada uno de ellos basta para dos galones de aceite de higuereta ; el bagazo que proviene de la estraccion de ese aceite no se puede aprovechar para los animales, mientras que constituj'e un abono regular que se aplica con ventaja á los ricinales. Según el señor Heuze, ese vejetal empobrece el suelo, que necesita por consiguiente mucho abono. Mani. — AracMs Jiipogea. M. D. — G. 1043. — Las semillas de ese vejetal conteniendo la mitad de su peso en aceite magnífico para muchos usos y que no se vuelve rancio , además su cultivo necesi- tando muy poco gasto, será pues siempre de bastante producto cul- tivarle en escala regular, sino como cultivo principal á lo menos las mas veces como cultivo secundario. Un suelo seco, cálido y liviano le conviene mejor que ningún otro; por consiguiente saldrá muy bien en el mismo terreno que la yuca, los ricinos, etc., y en los terrenos de aluvión especialmente que se podrán regar con facilidad durante la estación seca y cálida. Des- pués de limpiado el terreno como ya lo tenemos mencionado tantas veces y de quemadas las basuras, se pasa el arado para volcar bien la tierra y se echará la semilla en los surcos abiertos en línea recta y como á media vara de intervalo, 3 á 5 semillas se colocan juntas ; cada surco está distante de los vecinos como de una vara ; después de alcanzada la planta sus seis primeras hojas, se aporca con el aza- dón y se desyerba á la vez. Se debe aporcar algunas veces, á fin de que los frutos puedan penetrar con facilidad en la tierra y madurarse mejor. La siembra se hará desde mayo hasta junio. Ese vejetal está sujeto á estar atacado por los gusanos; será pues bueno vijilarle y además el ganado le apetece mucho, por lo cual se le debe tener bien cercado. Se emplean 250 á 300 litros, es decir 90 á 100 kilogramos ó 180 á 210 libras de semilla para una hectárea, bien se siembre en línea recta ó en hoyos á 12 ó 14 pulgadas de distancia uno de otro. Las vainas están maduras cuando las matas se habrán puesto amari- llas, las hojas y tallos hallándose casi secos. Entonces se arrancan 4S0 APÉNDICE 2''. con la mano, se sacude la tierra y se cuelgan en ranchos á propósito bien secos y venteados ; se desgranan por medio de mandadores muy livianos para no dañar los granos. Su producto es bastante variable; en efecto varia entre 1,500 y 4.500 kilogramos ó 3 á 5 mil libras por cada liectárea ; el producto medio varia entre 1,800 y 2,500 ki- logramos ó 50 á "70 hectolitros ó 5 á T.OOO libras; un hectolitro de vainas ó frutos pesando 36 á 40 kilogramos 12 a 80 libras, según su tamaño y calidad. Se saca de los frutos no limpiados de la concha 30 á 34 por 100 de aceite, y de las semillas mondadas ó limpias 45 por 100 y que da en el primer caso 68[100 de bagazo y 55{100 en el segundo ; ese bagazo es blanquecino por causa de que contiene fé- cula blanca muy fina y además 6 á '7[100 de ázoe normal, es duro y pesa bastante; se puede aprovechar para el alimento de los animales domésticos ; constituye además un alimento muy bueno para el ga- nado vacuno que aprovecha con gusto sus hojas ; tal residuo es tam- bién un abono magnífico. Tal cultivo, que deja bastante utilidad, está planteado en escala mayor en muchos lugares de América y se mandan á Europa anualmente muchos cargamentos de esa semilla saliendo de casi todas las partes del mundo. Las semillas se ponen rancias con facilidad, y viejas ya han per- dido mucho aceite ; se deben guardar los frutos en lugares ó alma- cenes ni húmedos ni demasiado secos tampoco, porque en el primer caso se enmohecerán y en el segundo perderán en su peso notable- mente. Ajonjolí. — Scsamum oriéntale. M. D. — G. 540. — Ese cultivo necesita también de un suelo liviano, arenoso y seco : los terrenos de aluvión son muy apropiados para él, especialmente si se pueden regar; después de desyerbados y quemadas las yerbas , malezas y hasta sus raices recojidas después de las labores, se abren surcos en línea recta y se echa la semilla como á 2 ó 3 pulgadas de inter- valo : las hileras deben estar á distancia las unas de las otras como de media vara, después 4á 6 hileras formando un acicarate ó cuadro mas ó menos largo y dirijido del Este al Oeste, se deja otro tanto terreno vacío para sembrar batatas ú otra vianda y se vuelve á sem- brar otro cuadro igual al primero y se sigue así alternativamente : se pueden obtener dos cosecha? al año en el mismo terreno, espe- cialmente si se le puede abonar para la segunda siembra, y al año siguiente se entregará á ese cultivo la parte empleada para sacar otro producto y que alterne con él. La tala sembrada en febrero es- tará ya buena para cosechará fines de mayo y la segunda, entrega- da á la tierra en junio, se recojerá como en setiembre ; otras veces se siembra todo el terreno : se dará uno ó dos desyerbos, según lo requieran las yerbas. Cuando se han vuelto las matas amarillentas y las cápsulas roji- zas, la primeras principiando á reventarse, se corta ó se arranca la planta, se la ata por manojos ó hacecillos que se colocan derechos en el suelo, abriéndoles la base : esta operación ha de hacerse antes de la madurez completa de todas las cápsulas, y especialmente por la madrugada y por la tarde, porque se desgranan con mayor facili- dad: 12 ó 15 dias después de arrancadas las matas, las cáp:5ulas es- DEL TABACO. 481 tan ja secas y buenas para desgranar, lo que se hace azotándolas, después de puestas sobre una tela á proposito , con unas varitas ó mandadores muy livianos ; en término medio se cuentan 45 á 50 cáp- sulas por cada planta, conteniendo 40 á 50 semillas cada una. Un liectólitro de semilla pesa 62 á 65 kilogramos ó 124 á 130 libras, y contienen 50 á 53 por 100 de aceite , pero no se estrae ordinaria- mente sino 46 á 48 por 100. El bagazo constituye un abono muy bueno y además se puede aprovechar para alimentar los animales domésticos; según los trabajos químicos de los señores Soubeiran y Girard, contiene 11/100 ó 3,57 de ázoe. Una hectárea de tierra sembrada con sesámeo en Argelia ha pro- ducido 14,75 kilogramos de semillas, de las cuales se han sacado 96 pesos de utilidad. La especie de harina que proviene del residuo de la estraccion del aceite sirve para dulces, para reemplazar la harina de almendras, para suavizar el cutis, y además se podria muy bien utilizar para los animales, que se la comen con gusto : la paja sirve para combustible y para abono. Se manda á Europa de muchos paises en donde se cultiva en escala mayor, anualmente muchos cargamentos de sésamo, que se venden á muy buen precio y se piden mucho, porque su aceite es inmejorable para las fábricas de jabón. Tabaco. — Nicotio/iia tabacum, N. repanda, Cba. ; íY. paniculata j glutinosa, Prú.: N. imsilla, Vera-Cruz. M. D. — G. 599. — El tabaco se presta á todas las temperaturas, pero prefiere la zona cá- lida, porque en ella vejeta con mas vigor : requiere un suelo silicio- so con capa vejetal, prefiere el litoral, las orillas de las quebradas y de los lagos; en las demás temperaturas sus ventajas son relati- vas y siempre mayores en los terrenos vírjenes, proviniendo de bosques derribados. Es sabido que la sal da fortaleza á este vejetal y mejora su condición, por eso sin duda le convienen las orillas del mar. Tardando cinco meses, poco mas ó menos, desde que se hace el semillero hasta su cosecha, y como no es conveniente que llegue esta en tiempo lluvioso, porque la hoja se lava y pierde gran parte de su cualidad, debe calcularse y proveerse desde el principio esta circunstancia, especialmente en los lugares donde nortea. La semi- lla se debe sacar de los lugares mas distantes y se debe evitar en lo posible repetirla en el mismo sitio. La primera cosa que se debe atender cuando se quiere cultivar ese vejetal es la naturaleza del terreno, que debe ser muy rico y contener como 10 á 20 por 100 de materias orgánicas vejetales, bien incorporadas en él, arenoso y de aluvión, ni demasiado alto, ni de- masiado bajo tampoco, capaz de quedarse con alguna humedad, como son las vegas por lo regular, lo mas horizontal ó mas llano po- sible. Bien que este vejetal estenue bastante el terreno, sin embar- go, si es rico y que contenga una regular proporción de mantillo, se le puede cultivar en él durante algunos años seguidos, especial- mente si se abona con üruano ú otro abono muv rico en materias or- gánicas y en minerales calcáreos; se ha calculado, á favor de es- perimentos hechos con todo el cuidado necesario, que una tala de tabaco saca en tros meses de un acre de tierra como 170 libras de sustancias minerales, lo que es muy superior á la proporción de TOMO II 31 482 APÉNDICE S"*. iuiiale?; sustancias sacadas del suelo, sea por el trigo, sea por cual- quiera otra clase de vejetal. en el intervalo de 6 á 9 meses. Es preciso principiar por formar el semillero ó almacigo, y se ha- brán siempre de escojer para eso, si se puede, los lugares en donde estuvo una hoguera, ó si no hay, quemar la tierra lo mejor posible, porque, como lo tenemos ya dicho, no solamente la postura saldrá mucho mas vigorosa y mucho mejor, sino que también muy pocas yerbas y muy pocos gusanos vendrán á molestarla y á dañarla. El sitio escojido para semillero se ha de limpiar de todas las yerbas, amontonarlas para que se sequen y llevar á ese lugar todas las yer- bas secas, pencas, malezas, etc., dispuestas en montones ó mejor, si se pudiera, cubriendo toda su superficie de una capa bastante espe- sa, con alguna tierra por encima, y después de todo dispuesto así, ponerle candela, de manera que todas estas sustancias vejetales se quemen completamente, pero muy despacito, á fin de que el calor pueda penetrar bastante en el suelo para matar á las semillas de las yerbas malas y también á los gusanitos ó á sus huevecitos , que se quedan escondidos en ella. Eso hecho se darán al terreno bastantes labores, para que la tierra esté bastante desmenuzable, con el cuidado de sacar de ella todos los terroncitos, las raices y hasta sus pedacitos, que se quitarán entonces con la mano : un ras- trillo fino facilitará mucho esta operación, todas estas cosas amon- tonadas y secas se quemarán, como lo tenemos ya dicho tantas ve- ces: sus cenizas se esparcirán sobre las acirates ó cuadros, que se harán entonces como 3 á 4 pulgadas mas altos que el nivel general del terreno , anchas como de una vara, algo mas ó menos, pero siem- pre de modo que estando en la calle que separa los cuadros y cúja anchura es como de 6 á 8 pulgadas , se pueda con la mano limpiar ambos lados del acirate, arrancando las yerbecitas con los dedos y cuidando con facilidad la postura, teniendo la tan pronto limpia de las yerbas como de los gusanitos : la estación mas á propósito para entregar la semilla á la tierra es desde fines de diciembre hasta me- diados de enero; sin embargo, algunos lo liacen desde mediados de noviembre: se toma una onza de semilla bien mezclada con 5 partes de ceniza seca ó de arena, á fin de que esté separada lo mejor posi- ble, y se la echa al voleo ó se la riega sobre los cuadros así prepara- dos y de manera que caiga lo mas regularmente posible y no dema- siado espesa: después de sembrada así se ha de pasar lijeramente el rastrillo por encima, y concluida esta operación se pisa suave- mente la superficie del acirate con la planta del pié, de manera que cargando así con el peso del cuerpo, la tierra adhiere á la semilla de tal suerte, que las lluvias no se^la pueden llevar consigo. Si el se- millero parece haberse vuelto seco por causa del viento ó del sol, será necesario darle agua bastante para que el terreno se quede con bastante humedad hasta que la postura haya salido fuera. Si el sol fuese demasiado fuerte por causa de la posición del terreno, seria ^necesario darle sombra con pencas de palmera ú otro vejetal, soste- nidas por encima del semillero con varejones y varillas dispuestas á propósito ó haciendo una troja por encima. Es preciso vijilar la siembra en el almacigo ó semillero con mu- DEL TABACO. 483 cho cuidado, á fin de tenerle muy limpio de las yerbecitas que pue- den ahoprar la postura y de los muchos gu^anitos que se la comen al salirse de la tierra. Cuando el tabaco del semillero tendrá el tamaño de un plantel de col, es decir, como 4 á 6 hojas regulares, lo que sucede á los 30 ó 40 días , entonces se tratará de arrancarle y llevar la postura al campo dispuesto á propósito para recibirla; esta ope- ración se debe practicar especialmente al anochecer ó por la tarde- cita y de la manera siguiente : se debe en primer lugar remover la tierra con cuidado, empleando para eso un palo cuya punta esté dis- puesta á manera de lanza como de una pulgada de ancha ó una pa- lita de hierro hecha á propósito y de igual forma y tamaño : eso he- cho se reúnen las hojas de la postura las unas contra las otras y, metiéndolas con cuidado entre los dedos, se la arranca suavemente á fin de no romper las raices y se la coloca en un canasto á pro- pósito para llevarla al campo sin que pueda lastimarse ; cuando el terreno que siembrar es muy estenso, se puede sacar la postura por la mañana y por la tarde : después de haber arrancado lo que se puede sembrar en el dia, se ha de echar agua al semillero á fin de que la postura que se queda no sufra por esta operación y que la tierra se vuelva á adherir á sus raices. Inmediatamente después de formados los semilleros se ha de principiar á preparar el terreno destinado para ese cultivo : si el suelo está recientemente desmon- tado, lo que es mas favorable para que el tabaco salga de buena ca- lidad y que el producto esté abundante, es preciso arrancar y quitar los mas troncones y raices posible y trabajar la tierra de tal manera que su superficie esté lo mas igual y mas nivelada posible: eso he- cho, los troncones, raices y yerbas quemadas como lo hemos ya tan- tas veces señalado, se ha de esperar para dar al suelo una segunda labor igual á la primera, que las siembras hayan alcanzado como la mital del tamaño necesario para transplantarlas : es necesario esa vez sacar con cuidado todas las fibras y trocitos de raices que han podido quedarse mezcladas con el terreno, y así se remedia lo mejor posible el estado esponjoso de las tierras nuevas ó vírjenes, que or- dinariamente es causa de que el primer año de cultivo sea poco pro- ductivo. El suelo bien preparado y nivelado como conviene, se ha de par- tirle por cuadros ó acirates muy largos y dispuestos de tal manera que las lluvias no puedan escarbar el suelo ni desarraigar el tabaco, llevándose el agua la tierra consigo, porque estará algo detenida en las calles que les separan, y la disposición de los cuadros ha de corresponder á la situación del terreno y si no está pendiente el mayor espacio dejado entre las líneas puede cruzar oblicuamente para marcar las líneas á lo largo de las cuales se ha de plantar el tabaco; se colocará en cada estremo un palo ó estaca como de 3 pies de alto, con un cordel atado á su vértice, de modo que corresponda exactamente con la línea de siembra; tales hileras, que han de cor- rer del Este al Oeste y á como 3 pies de intervalo , están señaladas por las estacas puestas de antemano, mientras que el cordel de la primara línea puesto, se la ha de sembrar colocando la postura como á dos pies y medio la una de la otra, formando así otras líneas, cru- 484 APÉMDTCE 2"*. zando las primeras de Norte á Sur ; y se ata al cordel un trapo cor- respondiente con cada planta : la primera línea sembrada, se coloca el cordel de la segunda, atándole á sus estacas correspondientes, se ponen los trapos, se siembra la postura y se sigue así hasta que esté acabada la siembra ; se debe tener cuidado en que, el cordel estirán- dose el trapo, no se aparte de la postura y que esté mal puesto : las plantas deben estar todas sembradas en igual dirección y distancia á lo largo de todas las líneas. Se debe sacar la postura del semillero después de un aguacero y la puesta por la mañana en la tierra dis- puesta para recibirla, á lo menos que el tiempo esté nebuloso ó llu- vioso, se debe tapar inmediatamente, lo mismo se hará para la siembra por la tarde anterior, con pencas de palma ú otras hojas á propósito, á fin de ponerla al abrigo de los radios del sol saliente . será necesario darla agua, especialmente por las tardes, hasta que haya vuelto á levantarse el plantel y á echar raices; al hacer esta operación se habrá de tener cuidado en reemplazar cada pié marchi- tado y que está pronto para morirse, de tal manera que todo el jjlan- tío esté igual y que todas sus hojas se abran casi juntas y sigan ve- jetando así del mismo modo. Entonces se ha de remover un poco la tierra en su derredor, aporcándola lijeramente con la mano y la pala estrecha mencionada mas arriba al hablar del semillero. El primer desyerbo se ha de hacer pues temprano y antes que las yerbas dominen las nuevas plantas, las demás labores amuralladas se darán según lo requiera el campo. Durante su vejetacion el ta- baco está muy espuesto á encontrarse dañado por los 'gusanos, de los que unos se comen la postura al salir las primeras hojas y se quedan escondidos debajo de la tierra; otros salen délos huevecitos que han sido puestos en sus hojas por ciertas mariposas; se llaman gusanos del tabacoj son bastante grandes y viven á espensas de sus hojas; hay otros gusanitos mas pequeños que atacan la yema ó el corazón y que impide así su ulterior crecimiento ; en fin, otros se hallan es- condidos entre las costillas, en la horquilla que forman al separarse las unas de las otras y por la cara inferior: se alimentan de los sur- cos que chupan del vejetal. El único medio empleado para destruir- los consiste en buscarlos en el tabacal por la mañana y por la tarde diariamente, hasta que la planta esté ya bastante crecida; entonces basta ir de cuando en cuando á bus'carlos. Los muchachos y mucha- chas de 12 á 14 años convienen mejor para ese trabajo, y premiando á los que traen mayor cantidad de gusanos con una friolera, se aca- ba pronto con el azote ; como algunos hallan demasiado fastidioso rejistrar por debajo de cada hoja y de buscar también en la tierra, cuando se necesita, el propietario debe siempre vijilar por sí mismo el aspecto de su tabacal. Los pavos son muy á propósito para la des- trucción de los gusanos, porque gustan mucho comerlos, de tal ma- nera que en las grandes plantaciones será muy útil fomentar la cria de pavos para este objeto. Las plantas de tabaco, teniendo como unas 12 á 14 hojas buenas y llegando ya como á la altura de la rodilla, es bueno detenerlas ó descogollarlas, y para eso se corta con la uña la yema terminal, con cuidado de no dañar las hojitas que la acompañan, las cuales si la DEL TABACO. 485 tierra es rica y la estación sigue favorable, se vuelven tan grandes y tan buenas como las demás y llegan á su madurez tan pronto como ellas : de ese modo se pueden aprovechar dos ó mas hojas; así se consiguen hasta 16 y 18 hojas por mata y de 12 á 14 término medio. Esta operación es indispensable para determinar y favorecer el desarrollo de las hojas, así como para hacer llegar su madurez con mayor igualdad y ser mas completa : tiene además siempre por con- secuencia inmediata hacer salir retoños de la axila de las hojas y se les debe quitar cuantas veces aparezcan. Este último trabajo nece- sita que haya constantemente peones empleados en el tabacal, de manera que semanalmente quede recorrida y arreglada toda la plantación : estos desretoiíadores deben ser á la vez desgusanadores, y entonces se habrán de emplear los que sean necesarios para el do- ble objeto, de suerte que la recorrida quede hecha cada semana; á los cuatro meses de trasplantado el almízago empiezan á sazonarse las hojas bajeras ; su madurez se conoce por el color verde oscuro que toman, con algunas vetas azuladas y amarillentas y por la faci- lidad con que se quiebran y revientan sus peciolos de los tallos al inclinarlos un poco : tales hojas se recojen separadamente para tri- pa por ser mas ásperas, mas sucias y enterradas. Desde la capadura ó descogollo hasta la madurez completa transcurre un mes ó mes y medio, á proporción de la estación y de lo mas ó menos favorable que sea la esposicion del terreno ; la variación de color , cuyo verde se pierde en jaspes irregulares de un amarillo vivo, el avejigarse é inclinarse las hojas lánguidamente y por último el ponerse ásperas y quebradizas, son las señales mas notables de la madurez del taba- co, es decir, que está ya bueno para recojer. No se han de cortar las matas nunca antes que haya llegado su completa madurez, lo que se conoce por lo espeso y grueso de las hojas, cuyo aspecto parece como moaré : al tocarlas se las halla como gomosas ó viscosas entre los dedos, están cubiertas de una exuda- ción particular, con olor viroso, su vértice se va doblando por de- bajo, de manera que parecen mas cortitas que antes. Se debe evitar de cosechar con tiempo húmedo, á fin de no privarse de la sustancia viscosa particular ya señalada, lo que perjudicarla mucho su cali- dad. Cuando todo está listo ya para principiar la cosecha, los ran- chos dispuestos de antemano, sea de un modo duradero, sea tempo- ralmente y en el campo mismo en donde se hace la zafra, como lo hemos presenciado tantas veces en Puerto-Rico, se debe proporcio- nar un número suficiente de horquetas, largas como de vara y me- dia ó algo menos, las cuales plantadas en el suelo verticalmente sostienen una vara fuerte ó una pértiga, de manera que forman así una especie de caballete en que se colocan las matas atadas por pa- res al cortarlas, sin que toquen al suelo, y se las deja así espuestas al sol y al aire libre bastante tiempo, para que se amortigüen, de tal manera que se evite estén lastimadas ó dañadas las hojas por su roce ó contacto con los cuerpos estraños al llevarlas al secadero. Se corta la mata de un machetazo, ó á veces dos, aplicados oblicuamente á la parte inferior y al nivel del suelo, de manera que cortada la planta- no se caiga inmediamente y dé lugar á cojerla antes que se haya 486 APÉNDICE 2®. caido, porque si sucediese eso las hojas podrían lastimarse y hasta dañarse. Las casas ó ranchos para secar el tabaco han de ser vastas j siem- pre en relación con la cosecha que se ha de colgar adentro, con una calle en el medio, corriendo de un estremo hasta el otro para la ventilación y dar salida al aire ; deben además estar provistos por am- bos lados de bastantes puertas j ventanas que se puedan tapar cuan- do sea necesario : los ranchos deben tener igual disposición y sus lados se tapan con enramadas dispuestas como conviene ; en las ca- sas de secar, así como en los ranchos que las suplen en muchos lu- gares, hay vigas dispuestas á propósito para recibirlas matas amor- tiguadas en el caballote, de donde se las lleva al secadero : ha de quedarse algún intervalo entre las dos matas, suficiente solo para que el aire pueda circular libremente por entre ellas j determinar su desecación, que no debe ser muy pronta : á medida que se va adelantando tal desecación, las matas se deben acercarse mas las unas de las otras, de tal manera que haya lugar paralas que quedan, para poner en la casa de secar: el aire húmedo ha de ser escluido enteramente del secadero, ni se debe admitir el viento seco y cálido á fin de precipitar esa operación, que debe verificarse poco á poco y de Lin modo moderado, esceptuada la estación de las lluvias y en- tonces cuanto mas pronto se pueda secar será mejor. Durante que está de^secándose el tabaco se afecta mucho por los cambios ó alterna- tivas del tiempo, de tal manera que se mancha y cambia su color natu- ral pardusco en amarillento ó amarillo pálido. Cuando la parte media del tallo está bien seca, se puede quitar la mata del colgadero, y las hojas sacadas entonces se ponen en montones para sudarse, á fin de volverlas tabaco, porque antes de esta última operación que hace desarrollarse sus mejores cualidades, las hojas están muy sujetas á ser afectadas por el tiempo y no se las puede mirar ccmo otra cosa sino como hojas comunes secas, participando de la naturaleza del tabaco, pero no siendo todavía tabaco lejítim.o. La recolección ó cosecha se hace también por hojas que se arran- can, comenzando por las mas inferiores, de manera que se despren- dan del tallo sin llevar consigo ninguna astilla de él. Una vez ar- rancada la hoja, se coloca sobre el brazo izquierdo y así se siguen arrancando las demás j colocándolas unas por encima de las prime- ras y en el mismo sentido, hasta completarla brazada, la cual se deposita en un surco determinado ó sobre una tela ó cuero dispuesto á propósito, á fin de llevarlas al secadero con mayor facilidad y sin lastimarlas de ning-un modo, recargándolas en él de manera que queden puestas de canto, por ser el modo mas cómodo y conve- niente. Como esta separación se hace solamente con las hojas ente- ramente sazonadas, se habrá de repetirla dos ó tres veces hasta concluir la recolección. Después de arrimadas así las hojas, se las lleva al secadero y se colocan en el suelo con la punta hacia arriba, arrimadas unas á otras : el piso de los secaderos debe estar entari- mado ó al menos cubierto de paja, para evitar que se humedezcan las hojas : se las deja así dos ó tres dias para que pierdan su agua de vejetacion, lo cual se llama sudar, se calientan y principian á ama- DEL TABACO. 48*^ rular, poniéndose mas flexibles; entonces se hacen las sartas y para esta operación se emplean hilos gruesos, con una aguja de arria, ensartándola por el cabo, ó en varitas aguzadas ; se hacen también las sartas atándolas de tres en tres con una cuerda sacada de la concha del plátano ú otra á distancia de una tercia cada amarra de 3 hojas y así se van colgando en el caney ó rancho dispuesto á pro- pósito. Una vez colocado, en el secadero, bien sea en sartas ó ahorcadas, el tabaco se deja secar completamente, lo que dura 20 ó 30 dias, se- gún la temperatura, para formar los manojos y ponerlos á fermen tar, lo cual es la última operación. La mejor señal para conocer la completa desecación del tabaco es el estar completamente seco el cabo ó peciolo de la hoja y el no romperse esta, sino que vuelva á estenderse prontamente cuando se oprime en la mano. En tal estado se descuelgan las sartas y se deshacen los manojos con las hojas, igualándolas bien, de manera que ningún cabo sobresalga, y se debe escojer para esa operación una mañana fresca ; cada uno de estos manojos se ata con una hoja, dándola dos vueltas para que la se- gunda cruce sobre la primera y sugetando la atadura, pasando por el medio del manojo la punta de la hoja. Se quitan las hojas de los tallos durante un tiempo húmedo ó ne- blinoso y entonces se manea mas quietamente y se separan sus va- rias clases. Las buenas hojas se ponen aparte para capa, y las otras también, pero para tripa. Cuando se pone el tabaco en montones se ha de colocar la costilla de las hojas todas vueltas en la misma di- rección, á fin de que sea mas fácil cojerlas en la mano ; el montón he- cho como de uno ó dos pies de alto con una circunferencia ó base de tamaño correspondiente, se guardan todavía hojas para ponerse por encima de las otras y regularizar así la fermentación ó el sudor : después de las primeras 24 horas, las de la circunferencia se ponen en el centro y las del centro se colocan en su lugar : eso hecho una vez ó dos, se debe tapar cuidadosamente el montón con sábanas do- bladas ó con frisas, á fin de privarle, lo mejor posible, del contacto del aire, y abandonado así tapado, como unos 4 dias, adquieren las hojas un olor bastante fuerte para hacer estornudar y las demás cualidades propias del tabaco lejítimo : después de eso se hacen ma- nojos de á 24 ó 30 hojas, que después de bien secos se ponen en bul- tos para entregar al comercio. Esta operación ó la cura seca se hace también pasando el tabaco seco al descolgarle á la cama para darle calentura. Esta cama, á falta de un cajón que tenga la capacidad suficiente, puede formarse con varas delgadas bien unidas, con figura de cajón, acomodando allí las sartas, procurando no maltratar las hojas; al fin se cubre y se p«':'ensa lijeramente, poniendo encima un peso moderado ; se deja en ese estado por veinte ó treinta dias, según la cantidad de tabaco, que cuanto mayor sea mas pronto suda. Otro método hay para dar la calentura artabaco, que consiste en abrir un foso cuadrado en un lugar seco y de la capacidad necesaria; se abre en el verano, para qu^Q se seque bien al sol; después se forma sobre él un cuarto techa- do V cerrado. Cuando se vaya á poner el tabaco en él se cubren con 488 APÉNDICE 2°. esteras su fondo y paredes para que no caiga tierra y allí se pone para esperimentar la calentura. Concluida esta se sacan las sartas y se desatan las hojas, las que se van escojiendo y dividiendo en tres suertes: para capa, capote y tripa ; las primeras son las que están enteramente sanas, las segundas las que tengan algunas averías y las últimas las pequeñas y muy averiadas ; hecha esta separación, se las va poniendo separadamente en manillas de á 25 hojas, atadas por sus peciolos con una hoja del mismo tabaco y se amontonan de- jando así refrescar por 15 dias, pasados los cuales pueden embalarse para conducirse -al mercado; y aunque desde entonces pueda empe- zarse á labrar, estará mas acondicionada 6 meses después. Algunos le dan una segunda calentura de 8 dias, rodándole ya con agua y sal, ya con vino y canela, sarapia y otros ingredientes para darle un gusto particular. Tal tabaco , comprado para las fábricas de cigarros, lo trabajan los cigarreros que le embetunan, es decir, que, según el método particular de cada uno, le dan aromas j gustos particulares, mezclando con él preparaciones mas ó menos barbara- mente hechas ; pero engolfarnos en tal asunto nos llevaría lejos de nuestro objeto. Cura negra : estando ya sazonadas las primeras hojas y después del último desretoño, se recejen y encaman como para la cura seca, y á las 48 horas, así frescas se despalillan, no en totalidad sino las dos terceras partes, quitándole el nervio central desde la tercera parte de la punta para abajo, quedando la hoja unida en la punta con lo mas delgado del nervio. En esta operación se va separando la capa de la tripa y en seguida se van formando maromas que se lla- man vulgarmente morcillas ó madejas del grueso de los dos pulga- res unidos y del largo de 25 á 30 varas, para que con dos se haga el peso de una arroba después de puesto en condición. Para formar las maromas se van tomando manojitos de las hojas averiadas sobre las cuales se van acomodando en contorno las capas dobladas á lo largo por la mitad y de manera que la una quede pisada con la siguiente, y lo mas delgado de la hoja para afuera. Formadas así las madejas se hacen bolas que. se ponen en calentura, hacinadas unas sobre otras en bateas ó canoas, para recojer en ellas el ambir que desti- len, con el cual se bañan después; cada tres dias se han de voltear las bolas, formándolas nuevamente con lo de afuera para adentro, repitiendo la misma operación todos los tres dias, hasta que enne- grezca el tabaco ; entonces se va alargando el voltear de 4 en 4 y de 6 en 6 dias y hasta que esté todo el tabaco negro, hasta la tripa; esta operación se llama bolear y necesita operarios diestros. En los últimos boleos se sacan las bolas al sol moviéndolas para que lo re- ciban por todas partes. Curado así el tabaco se desbaratan los em- boltorios y se esponen las madejas nuevamente al sol por 4 dias, desde las 9 hasta las 12, volteándolas con frecuencia para que se se- quen sin tostarse ; á los 4 dias del sol se estienden en el caney ó rancho sobre las varas atravesadas y allí se dejan al aire por 20 ó 30 dias, para que no les quede humedad perjudicial á su conserva- ción : entonces se forman los rollos del peso de una arroba. Tal es el tabaco apetecido de los mascadores, que también lo usan para fu- DEL TABACO. 4(S9 mar. Regularmente se descuelgan las madejas para hacer rollos has- ta la entrada de las aguas, á fin de que la humedad atmosférica los suavice y se presten dóciles á la envoltura. Además de todas las pre- cauciones tomadas para la conservación, si ha de permanecer algún tiempo almacenado, es preciso examinar los rollos abriéndolos un poco por las cabezas y oliéndolas para desbaratar y voltear el que anuncie putrefacción. La formación de los rollos requiere intelijen- cia para que queden de tres cuartas de largo y dos tercias de circun- ferencia poco mas ó menos. De la misma cura negra han inventado los marcadores otras preparaciones, á saber : la gar apiña que con- siste en una maroma delgada, como el dedo meñique ó algo menos, muy ambirada ó con mucho jugo, que proviene no solo de lo que suda naturalmente el tabaco sino con artificio, haciendo un fuerte cocimiento de los palos y tabaco averiado con que le bañan, algunos le agregan un poco de dulce. El anduyo es ese mismo tabaco doble- mente ambirado ó embetunado, encerrado en los canutos de la caña hueca ó carrizo, en que se conserva fresco y en todo su jugo, se va gastando canuto por canuto ; la hueva, para esta preparación se hace uso de ambas curas y consiste en ambirar ó en embetunar las hojas abiertas, volverlas á sacar al aire y después prensarlas unas sobre otras en manojos del peso de una libra. El oyió y el chimó, de que hemos tratado en el Compendio de terapéutica, son preparaciones que usaban los indios ó indíjenas antes de la conquista. Se cultiva en Costa-Firme y sale muy bueno y muy apreciado el del Rio-Negro, el de Cumaná, llamado Guácharo, de Upata, de Varinas, etc. Las cepas de tabaco cosechado no tardan en retoñar ; entonces se ha de dejar el retoño mas fuerte quitando todos los demás, se limpia el tabaco de los yerbas que salen con los retoños que se han de aporcar y de cuidar después como se hace para el mismo tabaco y de ese modo se coje una segunda cosecha muy regular, pero cu^'a calidad es algo mas inferior ; se ha de cojer la semilla de las matas no capadas y dejadas á propósito en el semillero ú otro lugar dis- puesto para eso ó solamente á uno de los estremos del tabacal cuya estension ha de corresponder con la cantidad de semilla que se nece- sita sea para la siembra del año próximo, sea para el comercio ; la semilla no se debe cojer de los retoños, aunque se suele hacerlo así en Cuba, sin duda por causa de economía. Sucede con bastante frecuencia que el tabaco pierde todas sus cuali- dades naturales y degenera por solo haber sido transplantado de un suelo á otro que no le conviene, ó por ser demasiado pobre ; en Cuba los mejores terrenos para ese cultivo son colorados, contienen bas- tante peróxido de hierro y muy poco calcarro. El cultivo del tabaco necesitando muy pocos gastos y dando siempre una buena utilidad conviene á los capitales cortos y hasta á los poco acomodados y á los pobres que suelen tener una tala de tabaco cuya utilidad reme- dia sus mavores necesidades ; en efecto, todo el suceso de ese culti- vo depende del cuidado que se tiene en escojer el terreno á propó- sito y el esmero que se ha de dar á la condición de la planta como á su preparación después de cosechada. 490 APÉNDICE 2*. En una fanega de tierra de 100 varas cuadradas calDen á las dis- tancias dadas de 4 á 5 cuartas 800 matas, cuvo producto, conside- radas las dos cosechas déla mata principal y retoño, dará un resul- tado de 4 onzas después de seco en condición, ó 20 quintales ; si el tabaco se labra por cuenta del cultivador cada quintal rinde 10000 cigarros. Añil, indigofera añil, etc. M. D. — G. 1060. — En Honduras, Demarara j en las Antillas, así como en el continente americano el cultivo de ese vejetal puede ampliamente remunerar y premiar el trabajo de los agricultores que se dedican á tal ramo, escojiendo especialmente las especies indíjenas ó americanas, porque necesitan muy poco cuidado y muy cortos gastos. La calidad del añil depende tanto de la clase cultivada, del suelo dedicado al cultivo, del clima en que se ha criado y ha vejetado el vejetal, como del método em- pleado para la elaboración. Sentimos no poder engolfarnos en la descripción de los procedimientos empleados para la preparación de ese producto pues que se les hallará estendidos en las obras de quí- mica industrial, y además eso nos llevarla demasiado lejos de nues- tro objeto ; nos limitaremos pues á escribir algunos renglones sobre su cultivo. Cuando se quiere plantar ese cultivo en escala sino mayor á lo menos algo regular, es preciso principiar por elijir un terreno á propósito cuya tierra ha de ser buena y de monte, no muy lejos de la ciudad si es posible ; hecho eso se tumJjan parte de los árboles que se emplean para cercar el terreno, y de la otra parte desmon- tada la llena inútil se quema, después de haber aprovechado la que puede utilizarse para fábricas ó por cualquiera otra cosa ; hecho eso en la estación mas seca del año se escarva el suelo abriendo surcos en línea recta, á lo largo de los cuales se echa la semilla con la ma- no ó con la carretilla sembradora, ó quizás mejor limpio y preparado el suelo se sub-raya por cuerdas paralelas entre sí, á media vara, y por la sub-raya se planta con el plantador á distancia de una tercia, poniendo media pulgarada de semilla en cada piquete. Esta operación es simultánea, así por la prontitud del trabajo como por aprovechar el descanso de las nuevas yerbas espontáneas por los efectos de la sub-raya; al paso que unos van sub-rayando otros van dando los pi- quetes, y niños ó mujeres van detras poniendo en ellos la semilla y cubriéndola con tierra algo comprimida. Cuando la nueva planta tenga tres ó cuatro dedos fuera de la tierra se la dará la primera labor, parte con la azada, parte con la mano, muy cuidadosamente para no cortar ni arrancar el plantel ; detras del desverbo se irán resembrando las fallas: el secundo des- yerbo se hará á fines de junio ó á principios de julio, aprovechando un tiempo seco para que esta operación sea mas eficaz ; si las lluvias fuesen escesivas y no pudiere lograrse una buena estación se le dará un macaneo de machete, pero al acercarse la florescencia á princi- pios de agosto, es necesario la limpia de azada para que al cortar el añil para batirlo no lleve consigo yerbas estrañas á los estanques; desde que apunte la fiorse ha de examinar diariamente el estado de jugo que tenga el añil para proceder inmediatamente á la cosecha, DEL AÑIL. 491 porque la yerba en buena sazón de rendimiento solo permanece re- gularmente 15 dias ; este estado se conoce partiendo algunos pim- pollos : si están lechosos tiene jugo ; si al partirles quedan secos, no está de provecho. Con el tiempo muy lluvioso no es conveniente cortar y batir porque además de que la yerba lavada da menos tin- ta, la zoca ó tronco cuyo retoño se espera para la cosecha siguiente se muere faltándose así la siembra. Para el corte del añil se necesitan cuchillos á propósito y para el acarreo bestias apareadas con sillones. La planta se ha de cortar á dos pulgadas del suelo y cargarla con la fresca, de las seis á las diez de la mañana, procurando que no permanezca en el campo hacinada, por lo que, al paso que unos van cortando otros van reuniendo y cargando y otro ú otros la reciben en el caney ó rancho situado al lado de la oficina, en donde se acomoda parada y con el desahogo posible, pero unida y sostenida por varas dispuestas á propósito en él. Aunque se trabaje en pequeño siempre convendrá construir una oficina entera por economía y con anticipación á la siembra, á fin de que, cuando llegue la época de batir, estén suficientemente secos y sólidos los estanques para que puedan resistir la fuerza del agua y de la baticion. La oficina debe situarse donde pueda conducirse el agua suficiente para la infusión de la yerba, para lavar los recipientes diariamente, después de la baticion y para tener llenos los de po- idrir, prefiriendo el agua de las fuentes puras á la de los rios cauda- losos, porque la limpieza y frescura del agua contribuye esencial- mente á la cantidad v calidad de la tinta. Una oficina de añil consta de dos estanques de podrir y dos de batir, con sus correspondientes piletas y tendales para coladores ; solo es capaz para batir cómoda- mente un campo de 20 tablones de á 100 varas cuadradas en el es- pacio de 30 dias ; y si es algo mas estenso el campo y no hay mas que una oficina, para remediar en lo posible el inconveniente se em- pezará á cortar y á batir antes de la perfecta sazón de la yerba, por- que, como dicen los prácticos, mas vale batir jojoto que pasado. El añil jojoto, mas ^'-a apuntando la fior, da menos rendimiento, pero muy buena tinta ; el pasado rinde menos y presenta dificultad en su elaboración. Cortado el añil en su sazón, todo á la vez, puesto á se- car para deshojarlo y guardada la hoja seca se batirá cómodamente sin el peligro de que se pase y pierda la hoja en el campo ; entonces una tancada de tales hojas producirá cuatro veces mas tinta que la de las yerbas frescas con las matas y ramas, pues es la hoja la que contiene materia colorante, y aunque pierde algo de esta materia en su seca, no hay duda que seria mu}- cómodo y mas productivo sembrar un gran campo y batirlo así seco en media oficina. La estación de las lluvias principiando siempre en mayo, favorece de tal suerte ese cultivo, que el añil está ya bueno para cortarse como hacia mediados de julio ó en agosto ; ha necesitado solamente dos meses y medio para llegar á su madurez, lo que se conoce tam- bién porque se está cubriendo de una harina verduzca. La cosecha del primer año es siempre bastante corta y alguna vez que otra no vale la pena de elaborarse , mientras la del segundo año es magní- fica y muy abundante; la del tercer año sale también muy buena. 492 APÉNDICE 2°. especialmente si se ha tenido el cuidado de desyerbarla. Muchos plantíos de añil duran mas de 8 á 10 años, dando anualmente muy regulares productos sin que haya sido necesario volver á sembrar. Pero para que la siembra se pueda conservar productiva es preciso tener cuidado de desyerbarla oportunamente y de resembrar las fallas inmediatamente después de cada corte, renovándola cuando las cepas ya fatigadas de la reproducción forzada por los cortes re- toñe sin vigor. Una manzana ó tablón de 100 varas cuadradas, lo que es como unos dos acres, produce generalmente como 100 á 120 libras de añil elaborado. El bagazo ó residuo de tal fábrica, así como las aguas que provienen de esta especie de fermentación, son, como lo tenemos ya señalado mas arriba, páj. 432. un abono magnífico para los cañave- rales ; el vejetal mismo se utiliza con mayor ventaja como abono verde. El añil teniendo sus raices perpendiculares, las cuales pene- tran de como un pié en el suelo, se habrá por tal razón que desme- nuzar el suelo hasta igual profundidad, y cuanto mejor estará pre- parada la tierra que ha de recibir la semilla, mas productiva saldrá la zafra. El accidente mas grave de ese cultivo es la invasión periódica de los gusanos; esta plaga, fatal para el añil y también para el algodón, de que hablaremos á continuación, aparece cada tres ó cuatro años y con tanta abundancia, que en dos dias acaban con el campo mas es- tenso ; no hay entonces otro remedio que cortarlo todo y batir lo que se pueda, porque lo que mas interesa es el retoño. Cuando ha llovido muchos dias seguidos, aun cuando la planta esté ya en sazón, debe suspenderse el corte y esperar á que levante el tiempo, porque además de que la yerba lavada da poca tinta, se pierde la mayor parte de la zoca y mas vale conservar el vejetal que el pequeño pro- ducto de aquel momento. Regularmente se dan tres cortes anuales : en setiembre, diciembre y á principios de mayo: este último á veces es improductivo pero indispensable para que el vejetal retoñe con vigor á las primeras aguas, y así es que los añileros dicen : en mayo se ha de cortar para batir ó para botar. Cuando ese corte es peque- ño pero de provecho se receje en sábanas que se atan por las puntas y así se carga; una tancada de esta yerba menuda produce doble tinta, porque casi todo es hoja. Los gastos de un tablón de añil desde la preparación del terreno hasta el estado de batir, incluso el valor de la semilla, está calcu- lado en 25 pesos : los posteriores, hasta dejar seca la tinta, son muy variables, porque están en relación con el tamaño de la planta, el, numero de ta,ncadas que rinde y su producción; pero en resumen se puede contar 7 reales libra por gastos del primer corte de la plan- tilla y 6 reales por los siguientes, esto es, con tareas de á 3 reales en cultivo, de 4 reales á los batidores y 8 reales al puntero; si estos jornales costaran mas, acrecerá relativamente el costo de cada libra, y esto sin contar con los accidentes que pueden suceder y sin el in- terés del capital invertido en la construcción de la oficina, de donde se puede racionalmente establecer el costo principal de una libra á 8 reales. DEL ALGODÓN. 493 Ese vejetal proí^pera á la alturas siguientes por encima del nivel del mar : desde 600-630 hasta 1,071( varas, con una temperatura me- dia de 48°, 60 á 40", 61 farenlieit ó centígrado desde 10 hasta 15, pero vejeta perfectamente bien con temperaturas mayores. Algodón. — Gossypium larhacUnse, etc. M. D. — G. 971. — Los terrenos ricos y aluviales son los que.se adaptan mejor á ese culti- vo ; sin embargo se puede cultivar con ventaja en otras clases, pero en ese último caso es necesario para sacar utilidad abonar con cal especialmente y abonos naturales ó artificiales fertilizantes. El al- godón se produce en todas las temperaturas, no necesita de suelo muy fértil ni demasiado húmedo ; por el contrario, le dañan las llu- vias en su florescencia y fructificación y prospera en los lugares secos y abrigados de los vientos del Xorte. Se debe preparar el terreno afines de febrero ó muy á principios de marzo, del modo siguiente : primeramente, después de limpiado como lo tenemos dicho ya tantas veces, se deberán hacer las aradas en surcos de á seis ó de á ocho hileras juntas, lo cual se llama era, cuidando de dejar espacios suficientemente anchos, á manera de ca- lles, entre las eras que se van formando. El arado de pala es el que se suele usar mas comunmente para esta operación ó labor, y por lo general se hacen los surcos de 4 á 5 pulgadas de profundidad. Después de formadas así las eras se procede á la siembra, la cual se efectúa de diversos modos, pero en los algodonales grandes y plan- tados en escala mayor se sirven generalmente de una clase de ma- quinaria simple, la cual al mismo tiempo que abre el suelo en la era, va desparramando la semilla donde corresponde. De ese modo las aberturas hechas en los surcos no son profundas y la semilla no que- da muy enterrada, que es lo que requiere el algodón; se le puede sembrar, sin embargo, de cualquiera manera, en la intelijencia de que las circunstancias estén iguales para la semilla : pero raras ve- ces saldrá el trabajo tan barato. Después de completada la siembra se comienzan á arar los espacios de terreno que se hablan quedado incultos entre las eras. Cuando el agodon habrá crecido como unas dos pulgadas de alto, se debe principiar á podarle; esta operación consiste en cortar todos los pies ó tallos sobrantes, lo que se hace con arados de mango largo, de tal suerte que haya uno ó aveces dos tallos juntos distantes como de unos 4 pies una mata de la otra. Eso hecho se debe comenzar á arar el terreno de nuevo, procurando que el arado pase tan cerca del algodón que vaya arrojando á un lado la suciedad ; eso concluido se repite la misma operación con la diferencia que esta vez se echan los surcos al lado opuesto ; no siendo lluviosa la estación, tres limpios ó desyerbos son suficientes para una cose- cha de algodón ; pero si las lluvias fuesen copiosas seria preciso con- tinuar las limpias hasta que los tallos sean de tamaño tal que no im- pida su progreso la presencia en el algodonal de las otras yerbas; así se cultiva en los Estados-Unidos. Cultivo en Venezuela : Cualquiera que sea la clase de algodón que se cultive, limpio el terreno y sub-rayado por cuerda, se siembra, con el plantador, por mayo, á la distancia de vara y media por ca- lle y de una vara por la hilera, en los lugares secos y templados. 494 APÉ.NDK E 2°. poniendo tres semillas en cada piquete ; á los 15 dias nace regular- mente y fructifica á los 7 meses. Cuando tendrá un palmo fuera de tierra la planta, se desyerbará el algodonal y se resembrarán las fallas, sembrando una hilera de maiz por medio de la calle ; se con- tinúan las limpias de costumbre. Bastarían dos limpias si estuviese solo, la primera al resembrarlo y la segunda al florear ó cuando esté el fruto en botón; pero como en Venezuela se suelen aprovechar los claros de las calles con malees en el invierno y con caráotas y frijo- les en los nortes; las limpias ya de azadas, ya de machete, serán re- lativas al cultivo de tales plantas ; lo que importa es que el algodón esté limpio al tiempo de la cosecha. En su fructificación, al abrir el capullo es menester recojerlo, porque permanece poco tiempo des- pués en la planta, como unos 5 ó 6 dias, pasados los cuales se des- prende de la cápsula y se cae ó el viento se lo lleva en madejas abier- tas. En las tierras frias tarda mas de 7 meses en fructificar y á la altura de 1,500 varas hasta 9 meses. Si se descogolla la planta á la altura de una vara y después se hace lo mismo con las ramas, estas se duplican, se multiplica la planta y carga con mas abundancia ; los retoños que salgan del pié se deben quitar. En los terrenos feraces de la zona cálida se siembra á mas distancia, dándole dos varas de calle. La cosecha sobreviene en el verano ó mejor dicho en los meses en que calman y cesan las lluvias, por enero y febrero, según* ha sido la florescencia. La recolección de un canasto bien comprimido da el peso de una arroba, y las manos mas lijeras recojen apenas^- tres ca- nastos al dia. Como á todo fruto es necesario asolearlo antes de al- macenarlo, el algodón florece en los Estados-Unidos durante el mes de junio, y si la estación ha sido favorable, los primeros capullos se hallan no solamente formados, sino también abiertos, manifestando así la blancura del algodón antes de fines de julio. Los capullos que primero se abren son los de las ramas de abajo, y los mas tardíos, que se llaman algodón de cabeza, son los de las ramas mas superio- res. Cuando se habrán abierto los capullos suficientemente, se em- piezan á hacer las recojidas ó á cosechar el algodón, lo que se hade verificar tres veces, porque las flores saliendo sucesivamente, los ca- pullos no maduran todos juntos, pero se suceden los unos á los otros de igual manera. Los recojedores al pasar se llevan el algodón que se desprende con mayor facilidad de los capullos abiertos, que des- pués de tal operación se quedan vacíos y el algodón cojido así lo echan en un saco colgado de su cuello. Las cosechas duran hasta cerca de Pascua y algunas veces hasta mas tarde. Después de haber tenido el algodón cosechado, así almacenado por algún tiempo, se le pasa á la máquina que ha de desmotarlo y en seguida se le lleva á la prensa de donde salen los bultos buenos para ser entregados al comercio y á la esportacion. En un cuadro de IDO varas, á la distancia de una vara á vara v media, caben 7,500 matas, y calculándose á cada una 6 onzas de al- godón en bruto, equivalentes á 2 en limpio, deducido el 60 por 100, peso de las semillas, se tendrá una libra por cada 8 matas y una fracción, que puede en totalidad quedar todo reducido á 9 quintales QUINCHONCHOS. 495 netos en el cuadro. Como en el vacío de la< calles ha debido sem- brarse maíz en mayo y caráotas ó frijoles en octubre, se dejará el producto de estos frutos á favor de los gastos de siembra v cultivo hechos en común y empezarán los gastos particulares del algodón, solamente desde su recolección, que se pueden calcular en 5 pesos quintal y suponiendo por precio medio del algodón 15 pesos quintal, el producto líquido del cuadro será pues de 90 pesos. La semilla separada se usa en los Estados-Unidos para alimento de las vacas de leche, durante los meses de invierno; pero mas co- munmente se emplea como abono, después de molida, por lo cual es muy valiosa y en la sementera de maiz produce resultados notables. Se dice en efecto que como abono fertilizador casi no tiene igual y como tal lo emplean en el Sur para hacer productivos los terrenos ya estenuados, y que con solo un cuartillo de este abono en una se- mentera de maiz, hace aumentar en muclio el tamaño de la mazorca y le da además un color mas oscuro y mas lustroso. Además, como lo tenemos ya señalado en el Compendio de Terapéutica vejetal, las semillas contienen bastante aceite para sacarse con provecho, por- que muy delgado es propio para el alumbrado y las fábricas de jabón, y el bagazo servirla sea para abono muy bueno, sea para los animales domésticos, para los cuales seria muy buen alimento. En los desmo- tes se podria pues sacar mucho provecho de esa nueva industria muy poco costosa, pues que se necesitaría solamente una buena prensa de hierro y de tornillo, como para la esplotacion ó estraccion del aceite de ricino ó higuereta. Ese vejetal puede prosperar y dar producto á las alturas siguien- tes : 630, lO'íi y 1415 varas, con una temperatura media de 81,17 farenheit, y entonces necesita para dar producto 6 meses y medio, con una de 46'', en ese caso necesita 7 meses, de 40^,61, y hasta en ese tercer caso 1 meses y medio, y en ñn á 34,61 no llega á parir sino á los 9 meses : en una fanegada de 170 Abaras, lo que es casi 153 yardas inglesas cuadradas, caben 28,900 matas, que darán de ducto, durante como 3 años y medio, 14,550 lil)ras cada mata, pro- produciendo al año media libra de algodón limpio. ■ Mostaza. M. D. — G. 829 . — Esta planta se cultivarla con bas- tante provecho en las Antillas y en el continente americano, su cul- tivo no necesitando ningún gasto, pues que basta esparcir un puña- do de semilla en un terreno que esté algo húmedo y limpio, y ella nace, crece y fructifica sin necesidad de labores, dominando con al- tivez las yerbas espontáneas. Se cosechará del mismo modo que el ajonjolí. Quinchonchos. M. D. — G. 1065. — E^e arbusto que fructifica durante algunos dos, tres y mas años consecutivos, debe plantarse en la primavera para que esté mas robusto al florecer en diciembre. Generalmente no se hace una siempra especial de ese vejetal; solo se emplea en guarda rayas ó entre calles, pero es preciso tener pre- sente que se debe hacer un ahiladito de alguna estension cerca de la casa, porque se necesita de su semilla, no solo para el alimento de los hombres, sino también para la cria de gallinas y demás aves do- mesticas, de manera que se podrá sacar de él bastante provecho ; en 496 APÉNDICE 2°. este caso se sembrarc'ui á dos varas de distancia por la hilera, y dos y media á tres varas de calle, poniendo con el plantador tres granos en cada hoyo ó piquete y mantenerlos con aseo cuando tema toda- vía las plantas, porque mas tarde necesitan solo que se les limpie de las plantas trepadoras, y para que sea mayor el producto se ha de cortar la mata todos los años por abril ó mayo á media vara de al- tura. Onoto, achiote, etc. M. D. — G. 890. — Ese arbusto ó arbolito gusta de los terrenos de aluvión, fértiles y frescos, por lo que se le halla silvestre en las orillas de los arroyuelos y de las quebradas; sin embargo, vejeta regularmente en cualquier terreno liviano : si fuera demasiado pobre el suelo seria preciso abonarlo con detritos vejetales, yerbas verdes, etc., etc. Se reproduce de semilla que se siembra, desde enero hasta mayo, en un suelo recientemente arado, á la distancia de 4 pies en todos sentidos : se echarán tres semillas en cada piquete, que se cubrirán con un poco de tierra sin pesar. Cuando la siembra tenga como de 6 á 8 pulgadas, se arrancarán los sugetos débiles, dejando solamente uno, el mas vigoroso; se limpia y se aporca : al año siguiente al limpiar el achiotal de las enredade- ras y yerbas con un macaneo de machete, se les poda como á una vara ó algo mas del suelo, para facilitar la recolección de los frutos y se mantiene el tronco á esta altura : el segundo año ya la planta- ción tiene toda su fuerza y lozanía y dura así 3 á 4 años; nos parece que con el cuidado de podar las matas convenientemente se las po- dría hacer durar productivas muchísimo mas tiempo. La cosecha se hace dos veces al año, en junio y en diciembre. Se habrán de recojer las cápsulas maduras, que después de secas se batirán sobre un suelo bien unido ó una tela grande dispuesta á propósito, con varitas, y las semillas así preparadas se pondrán sobre entablado, para secarse al abrigo de la luz directa del sol y en cuarto ó almacén bien ven- teado ó seco y después de eso se pondrán en barriles. Las operaciones bastante numerosas y largas que suele hacerse sufrir á las semillas para sacar el achiote ú onoto del comercio, no saliendo siempre felizmente, porque á veces las semillas se pierden, otras veces el tinte se quema durante la evaporación ó cocimiento ; en fin, ya preparado y puesto en panes listos para el comercio, fer- menta, pierde de su calidad y hasta se daña, tanto que es preciso botarle. Al ver resultados tan inciertos se ha buscado si se ganaba algo en preparar el achiote de esa manera, y se han asegurado que no habia ventaja alguna, sino para limpiarle de las semillas y dis- minuir por consiguiente el peso de las 2i3 partes, y por consiguiente otro tanto los gastos de flete para Europa, y para conducirle á los puertos de mar. En efecto, se ha esperimentado que los géneros te- ñidos con las semillas tales cuales salen de las cápsulas, sea antes, sea después de su desecación, han salido tan hermosas y quizás algo mas duraderas. Si se atiende á los gastos que necesitan las opera- ciones de preparación del achiote, y si además se hacen entrar en cuenta las pérdidas proviniendo de los inconvenientes mencionados mas arriba, no habrá duda alguna que los agricultores sacarán mu- cho mas provecho de eso producto en semillas. Además el achiotero, Dtí L\ Vainilla. 497 ¡siendo ai'bolito muy bonito y hasta de adorno, se le podrá sembrar en derredor de las casas, en los patios y como cultivo suplementario que no dejará de dar utilidad : su corteza dá curagua y puede servir para tejidos, y especialmente para sogas. Vainilla. M. D. — G. 422. — Vainilla sativa, Schied. ; V. pom- pona, Schied.; V. planifolia, Hort. Kw., etc.; V. guianensis, Split- gerbert. Tales son las especies botánicas americanas que suministran la vainilla del comercio. Se hallan en el comercio de la droguería 3 clases de vainilla : 1* vainilla lee, leg ó lejítima, producida por la vainilla sativa, es un poco blanda y viscosa; guardada en un lugar seco se cubre de cris- talitos en forma de agujas brillantes, que son formadas, según el se- ñor Gobley, de vanillina y no de ácido benzoico, como se creía; 2* la vainilla cimarrona ó bastarda, mas corta, mas delgada, mas seca, menos oscura y que no se cubre de cristales y proviene de la vainilla silvestre de Schiede : 3* la pompona, mas pequeña todavía, blandita, viscosa y casi negra. La vainilla, planta á la vez trepadora, carnuda y abejucada, pero sin fuerza, necesita del apoyo de los demás vejetales, por encima de los cuales está trepando, sosteniendo y ayudándose en esta ascen- sión por las manos ó especie de zarcillos que tiene á propósito. Ne- cesita de un suelo rico, cálido y húmedo, á la vez que un poco som- brío, para vejetar lozana y dar provecho. Después de haber escojido el lugar á propfjsito, dice el señor Desvaux en los Anales de las Ciencias naturales, año 184G, dejando en él los arbustos que dan poca sombra, sin dar ninguna labor al terreno , se siembra al pié de cada arbusto ó árbol un trozo de tallo de vainilla teniendo 3 á 4 nu- dos, escojiendo para eso la estación mas cercana de las lluvias : se ha de visitar el vainillal una sola vez al año para limpiarle con el machete de las malezas inútiles y bejucos que le pueden perjudicar, y al tercer año solo principia r^^-^'ir algún producto. Así se cultiva ese vejetal en el pueblo de Mj;^ ;¡'3ha, situado á como 24 leguas al noroeste de Vera-Cruz. Distinguen 5 especies de vainilla, á saber : la la corriente ó cultivada, de la cual conocen dos variedades, de las que una, muy llena de semillas y de pulpa, de cáscala fina y delgada es la mas apreciada, mientras la otra, llamada cruda, tiene la cas- cara mas espesa, no es tan buena, y sin embargo es a¿az lejítima; constituyen la vainilla lejítima lee ó leg del comercio; 2* cimarrona ó silvestre, cuyos frutos son siempre mas pequeños que los de la corriente, se cria en los bosques sombríos, sus cápsulas están menos desarrolladas que las de la anterior, á la cual parece idéntica; sin embargo, maduran con dificultad, sin duda por causa de la dema- siada sombra; 3>» la mestiza, cuyos frutos están manchados de par- dusco sobre un fondo verdusco, cuando no están enteramente madu- ros : sus cápsulas son mas cilindricas que las de la vainilla lejítima y al desecarse son muy propensas á abrirse; 4^ la puerca, cuyos frutos son mucho mas pequeños y cilindricos que los de la lejítima, de un color verde mas subido, y al prepararla exhala un olor desagrada- ble que le ha valido el nombre de vainilla de cochino; 5» la pompo- na, cuya cápsula es mucho mas ancha y mas corta que la de la 498 APÉNDICE 2**. corriente, de corteza delgada, su olor es agradable y bastante pro- nunciado cuando principia á desecarse, pero sin embargo mucho menos delicioso, a menos que liaja sido encajonada con la corrien- te, pero parece que mas tarde pierde ese olor adquirido artificial- mente, por esa razón se la tiene casi como sin valor. La cosecha ó recolección de los frutos se hace hacia el mes de di- ciembre y su madurez se anuncia por su aspecto ó semblante; en efecto, de verde bastante oscuro se vuelve amarillento. Con fre- cuencia, sin embargo, se recojen antes del m.omento á propósito, lo que perjudica muchísimo la calidad del producto, por temor de los ladrones, que en ese pais no escasean. Se tiene siempre cuidado en llevar con el fruto el pedúnculo que lo sostiene. Si la vainilla ha sido recojida antes del tiempo ó prematuramente, su tamaño disminuye mucho durante la desecación, contiene menos cantidad de tripa y su corteza es menos fina v no tan flexible. Hecha la cosecha ó reco- lección, se deja marchitarse, si se puede decir así, el fruto, y cuando el producto ya no está verde, pero indica un principio de desecación, se empieza la preparación de la vainilla del modo siguiente : se po- nen esteras sobre un lugar enladrillado ó empedrado, dispuesto á propósito y sobre aquellas se estienden frisadas: cuando el sol habrá vuelto estas últimas bastante calientes, se colocan sobre ellas las cápsulas de vainilla uniformemente, áfin de que reciban igualmente todos los rayos del sol; cuando el calor habrá hecho desaparecer toda señal de vejetacion posible, lo que la costumbre indica con mucha facilidad, se levantan las frisadas, todavía calientes, se envuelven en ellas los frutos juntos y se depositan así en cajas, con el cuidado de taparlas bien con las frisadas, dejándoles sin embargo espuestos así á la influencia solar. Si la acción del sol ha sido favorable y suficiente, deben tomar en 12 horas debajo de las frisas el color bruno del café; en el caso contrario se repite la operación del dia anterior, hasta que hayan sudado bien de nuevcpoi^ro si el tiempo no es favorable para la preparación de la vainill'^r\o hará la operación á favor del calor artificial en un horno cuyo calor debe ser como el en que se quita el pan después de bien cocido. Para volver la calidad de la vainilla mas perfecta, es necesario, á pesar de la preparación indi- cada, durante cfos meses seguidos esponer la vainilla al sol diaria- mente, apartando y guardando las cápsulas á medida que están su- ficientemente desecadas, y es preciso tener cuidado en no dejarlas secar demasiado, pero solamente al grado conveniente, porque pier- den de su peso y de su cualidad, deben tener y conservar un cierto grado de blandura, que se aprende por la práctica y que la costum- bre y el aspecto enseñan. Así bien preparados los frutos, se ponen en paquetes de á 50, que se colocan en cajitas de hoja de lata; al hacer los paquetitos se les pone con demasiada frecuencia en el cen- tro calidades inferiores, lo que es un fraude muy culpable. El cultivo de la vainilla, para sacar un buen partido y buen pro- vecho de él, debe hacerse como sigue : el terreno escojido á propó- sito ó preparado para darle las cualidades necesarias de fertilidad y de humedad por medio de los abonos, que han de ser humus ó veje- tales podridos, y del riego, se dividirá en tabloides mas ó menos DE LA VAINILLA. 499 largos, separadoíá lo!^ unos de los otros por una calle, ancha como de vara y niedia á dos varas, sobre las cuales se plantará un troje ó un eniparrado ancho como el tablón, es decir, de vara y media á dos varas, á fin de que se pueda con facilidad alcanzar el medio con las manos, y como de vara ó algo mas de alto, formada de un armazón bastante sólido de madera no labrada y con su corteza, en el cual se dispondrán varas cruzadas de manera que los tallos y ramos de vai- nilla se puedan estender con facilidad y dirijir á su gusto sobre ella de manera á ocupar el menos espacio posible, sin estar demasiado empinados, sin embargo ; se sembrarán los trozos de vainilla provis- tos de 3 á 4 nudos, á como dos varas los unos de los otros de cada lado del emparrado y alternativamente, al pié de una de las estacas del troje, ó si no hubiese se le pondría una para sostener el tallo y guiarle hasta que se haya agarrado al emparrado; se le debe dar sombra, sembrando totumos en hilera recta por el medio de las ca- lles, á como 4 ó 5 varas los unos de los otros y conducirlos de tal manera que no principien á formar su copa sino como á dos varas y media de altura, teniendo cuidado en que los de una calle alternen siempre con los de las dos vecinas y correspondan con el medio del espacio que les separa. El semillero de totumos debe estar hecho de antemano, á fin de tener plantel ya listo para sembrar cuando se necesitará. Se dará sombra al emparrado con parchas , parchitas, tapíramos, guarácaros, caráotas y frijoles trepadores, sostenidos por enramadas ó estacas, formando como á una vara por encima del troje otro emparrado sostenido como conviene por otro armazón bas- tante fuerte, hasta que los totumos produzcan bastante sombra ó para ayudarles en los lugares en donde no haya bastante. Cuando la vainilla vejetará con bastante vigor sin echar flores ni bastantes ramos, entonces se le torcerá el estremo ó capullo, á fin do detenerla y obligarla á florecer, pero no se la deberá hincar como algunos lo han aconsejado, y cuando habrá echado flores será pre- ciso para asegurar el producto acudir á la fecundación artificial, porque naturalmente se verifica con bastante dificultad, de manera que la mayor parte de las flores no cuajan, mientras que con esta sen- cilla, pero minuciosa operación, todas las flores darán fruto que sal- drá mas grande y mucho mas fornido. Para eso será preciso vijilar la floración, y cuando se abren aprovechar el tiempo, porque son efímeras, es decir, que duran solo un dia y á la noche se marchitan. Con una púa de madera bien puntiaguda dispuesta á propósito y cuya punta está en la boca, á fin de que esté húmeda al servirse do ella, se quita con cuidado, lijereza y destreza la membranita que tiene tapadas las celdas de la antera ó estambre situado en el ápice de la columna ó ginóstemo, impidiendo así á las masas polínicas sa- lir afuera para cumplir con su objeto, lo que es bastante difícil na- turalmente, porque la abertura ó boca del estigma se halla por debajo de él en la cara anterior de la columna y ocupando un hondo, disposición muy poco favorable á la fecundación, por lo que la mayor parte de las flores permanecen estériles, saliendo fecundas algunas solamente. Para obviar á tal estado de causas y asegurar la fecundación y el producto por consiguiente, se toman con la punta 500 APÉNDICE 'Z^. húmeda de la púa las masas polínicas y se las aplica á la boca del estigma que se las chupa en el acto mismo y ya la fecundación ar- tificial está verificada, y la prueba consiste en que el ovario crece de mas de una línea en las 24 horas que siguen á esta sencilla, pero muy bonita operación, y se queda así durante dos á tres meses para después continuar creciendo, lo que dura como un año; en efecto, entre el momento de la fecundación y la madurez completa del fru- to transcurre un año. Haciéndose práctico puede uno en un dia fecundar algunos cientos flores. Cuando los totumos hayan echado ya copa y den bastante sombra, se les deberá aprovechar sembrando al pié de ellos dos vainillas, una de cada lado, con el cuidado de limpiarles de los demás parási- tos, que les acometen siempre, porque ese árbol es muy á propósito para criar orquídeas; además se sacará provecho de los totumas. Tal es el método que aconsejamos seguir en las Antillas, Guya- na, etc., cultivando la vainilla planifolia, natural de esos paises, y que se presta perfectamente á esta operación. ^0 podemos concluir este resumen de agricultura apropiada á las Antillas sin hablar de los pastos, porque sabido es que todos los ter- renos no pueden entregarse al cultivo y que se necesitan también mucho pastos para la alimentación de los animales herbívoros, ga- nado vacuno, lanar y caballar, ramo que en ciertos lugares como Puerto-Ptico es de la ma^^or consideración y deja muy buena utili- dad ; además las esplotaciones agrícolas necesitan bestias que sirvan de motor, áfin de multiplicar el trabajo, disminuir la mano de obra y también para transportar los productos, sea á los almacenes, á las fábricas ó al mercado. Los pastos pueden clasificarse en naturales ó permanentes y en artificiales ó temporales : los primeros se hallan naturalmente en las Antillas y se llaman savanas, de las que unas muy estensas, son naturales, es decir, que el hombre las ha encontrado así y nadie ha de ocuparse de ellas. Por mas estensas que sean en las Antillas las savanas naturales, no son nada en comparación de las pampas del Brasil y de las inmensas savanas que hemos visto en el Apure, cuya yerba es tan alta que un hombre á caballo se puede esconder en ella, por cuya razón en esos paises la cria del ganado es maravillosa, pues hay hatos de 80,000 reses, y potreros de 15 á 20,000 bestias; todo el cuidado que se tiene es quemar la yerba cuando está seca, pero en ciertos lugares solamente. Mientras las otras se han formado des- pués de los desmontes hechos muchos años antes; aquellas que son de estension limitada han de cuidarse si se quiere sacar utilidad de ellas. Cuando son de buena calidad no se necesita otra cosa que tener- las limpias délos arbustos yde sus retoños, así como de las malas yer- bas que en ellas se crian y que los animales no se comen, pero que son capaces ó de envenenarlos, tales son verbigracia, el tibey, la brinviliers, etc., especialmente porque son mas comunes que nin- guna otra clase, ó porque son demasiado duras, con las hojas á ve- ces cortantes, de manera que les lastiman la boca, tales son la yer- ba de cuchillo y demás cipráceas. Se debe establecer en ellas, cuando será posible, un buen sistema de riego ó de desagüe, según sean secas DE LOS PASTOS Ó PRADOS. 501 Ó espuestas á padecer sequía, ó que sean húmedas mas ó menos pan- tanosas, ó que se encuentren espuestas á anegarse. Por lo común se limita en las Antillas á talar las yerbas ó matas que los ganados no comen, sea porque son ya demasiado duras, sea porque son malas, como las de la familia délas cipráceas, tan comunes en los lugares húmedos especialmente, y seri-a bueno, cuando es posible hacerlo sin gastar mucho, arrancarlas, amontonarlas para que se sequen, y en fin quemarlas y utilizar sus cenizas como abono ó ' quizás mejor cuando se puede volverlas directamente abono, tratándolas con cal, como lo tenemos señalado mas arriba, páj. 429. Alo menos si no se puede abonar el pasto será necesario al talarlo esparcir por su su- perficie los escrementos de los animales que en ellos pacen, después de secos. Si el pasto es de mayor ostensión será muy provechoso divi- dirle en alo'unos cercados, cuva ostensión debe estar en relación con el número de animales que han de pacer j quedarse en él, y cuyo número habrá de ser tal, que cuando los animales pasarán en el úl- timo, la yerba haya tenido bastante tiempo para volver á crecer suficientemente en el I""" para que el pasto sea de provecho. Se podrá, como se suele hacerlo en Europa y también en las islas inglesas y francesas para los cañaverales, efectuar esa división del terreno ó pasto con alambres de hierro del tamaño del dedo de un muchacho de 6 años, en número de 4, puestos el primero como á un pié y medio del suelo, y el último como á vara y media, hechos fir- mes por buenas estacas, sólidamente plantadas en el suelo, provis- tas de agujeros por donde pasan los alambres, atándoles de trecho en trecho ; tales estacas han de estar distantes las unas de las otras como de unas 3 varas. Si el terreno fuese húmedo en demasía nece- sitando de desagüe, entonces los cercados se deberán hacer con zan- jas como conviene y bastante anchas para que los animales no pue- dan saltarlas : la tierra sacada al formarlas servirá para abono, ó se amontonará á manera de loma en una de sus orillas, en la cual se deberán sembrar arbustos y árboles á la vez de algún producto y que servirán de obstáculo para impedir á los animales salir afuera, como verbigracia, emajaguas, cedros de olor ú otros, según la na- turaleza del suelo, teniendo siempre cuidado de defenderlos de los dientes de los animales cuando tiernos con una línea de mallas ó mayas; será bueno también cuando el pasto no tiene árboles, para que los animales puedan ponerse á la sombra, sembrar en ellos al- gunos bosquecitos ó. arboledas, con árboles que puedan suministrar algún alimento, tanto por sus hojas, como por sus frutos: los guaci- mas y los samanes son muy á propósito, pero será preciso tenerlos cercados durante algún tiempo, porque sin esta precaución el ga- nado acabarla muy pronto con ellos. En Puerto-Rico, que es pais de cria, especialmente la parte Este y Sudeste de la isla, se suelen te- ner los animales atados con sogas, j á nuestro parecer el modo que acabamos de señalar, cuando se puedo ponerle en práctica, ahorra- ría tales gastos, y así dispuestos los pastos se les podria cuidar con mayor esmero y entonces sacar mayor utilidad de ellos. En cuanto á arrancar las malas yerbas y los arbustos, seria dema- siado costoso, porque hay tantas en el pasto que después de esta 502 APÉNDICE 2". operación parecería como si fuese arado, entonces es necesario li- mitarse á cortarles á algunas pulgadas dentro de la tierra de un golpe oblicuo de azadón bien cortante y dispuesto á propósito, ar- rancándoles después con la mano y pisando con el pié el suelo en el lugar correspondiente con la cortadura, á fin de que no se queden da- ñadas las yerbas vecinas ; acabada esta operación bastante minu- ciosa, y que necesita de alguna intelijencia ó mejor quizás de algún cuidado, se les amontonará para secarse, y después se les echará candela : no debe lim'áarse á esta única operación, porque seria trabajo y gasto perdido : en efecto, no tardan en retoñar, lo que se debe vijilar con cuidado, y cada vez que los retoños habrán llegado á como un pié de alto, se debe volver á cortarlos con el machete lo mas corto posible, pero sin dañar la yerba ni atacar el suelo, siguien- do así durante un par de años, ó mas según la naturaleza de las plan- tas que hay que destruir y persiguiéndolas sin cesar al momento casi que vuelven á aparecer, con el cuidado de nunca dejarlas echar flo- res, ni parir, ni volverse leñosas tampoco, se acabará con ellas bas- tante pronto: la raiz ó cepa, no pudiendo sacar de la atmósfera lo que necesita, se estenuará produciendo retoños y no tardará en mo- rirse; mas uno tendrá su pasto limpio de las malas yerbas y demás vejetales inútiles; cuanto mas cuidado tendrá en estercolarlo y regar si es posible, tanto mas hermoso será y ma^^or producto sacará de él, de tal manera que sus propios gastos se volverán dinero á premio. Llamaremos pastos artificiales á los que se hacen sembrando, en lugares desmontados á propósito, vejetales propios para el alimento de los ganados que hay que criar en ellos. Aquellos no solo se pue- den, pero se deben antes de tumbar los árboles medir por cuadros correspondientes con el tamaño que se quiere dar á los cercados, y las cercas así marcadas se las dejará separadas las unas de las otras por una arboleda natural formada por una hilera de árboles que se quedarán en pié al tumbar los demás; tal hilera deberá tener como unas o varas de ancho ó algo mas, según la disposición del terreno; no se habrán de desmontar nunca las partes demasiado peñascosas, } por tal razón inútiles y estériles después de tumbados los vejetales que les cubren y cuyo objeto es llamar á las aguas. Todo dispuesto así, se desmontará entre las arboledas, como lo tenemos ya mencio- nado mas arriba, páj.425. Siguiendo ese sistema de desmonte se hallarán las ventajas siguientes : menos costo en el desmonte, nin- gún gasto para cercar, porque bastará doblar las ramas bajas de los arbustos y de los árboles, enlazándolas con las enredaderas y beju- cos por cada orilla de las arboledas, de tal manera que los animales no puedan salir fuera : se habrá de vijilar á fin de tapar en el prin- cipio los boquetes hechos, hasta que los animales estén acostumbra- dos á quedarse así encerrados : además de eso proporcionarán siem- pre la sombra necesaria, tan pronto para los mismos animales como para el pasto, que así dispuesto no podrá padecer tanta sequía, y del que algunas partes estarán siempre mas ó menos proTejidas contra los rayos abrasadores del sol, de tal manera que proviniendo la hu- medad de los chuvascos ó del rocío, tendrán mas tiempo las yerbas DE LOS PASTOS Ó PRADOS. 503 para aprovechárselas y así estarán siempre mas frescas , padecerán menos sequía y después de comidas se volverán buenas para pacer mucho mas pronto : las puertas de algunos cercados tendrán siem- pre que abrirse en una calle principal para hacer mas fácil la mu- danza de los animales del uno al otro, y para conducirles á lo menos dos veces al dia al abrevadero, cuando cada cercado no tenga el suyo propio, ó que un arroyo ó unas quebradas no atraviesen la posesión de modo que se pueda sacar agua de ellos, por medio de canales ó de zanjas dispuestas á propósito : cuando no haya agua ninguna ó muy poca, lo que es la circunstancia mas perjudicial á tal empresa^ será necesario escarvar pozos y disponer estanques ó lagos artificia- les para recibir y tener guardada el agua de las lluvias, con ó ¡-in canales de distribución. Cada vez que la disposición topográfica del terreno esté á propósito, teniendo aguas abundantes bastante cer- canas de él ó atravesándoles, será muy ventajoso establecer un buen sistema de riego, á ñn de regar cada cercado en el acto de haber mudado los animales á otro, y así cada 6 á 8 dias, según la estación, el estado del suelo y la vejetacion mas ó menos lozana, lo que será siempre de mayor provecho. En efecto, el catedrático Liebig dice : (( En la vecindad de Liegen (en Nassau' se obtiene de un prado de 3 hasta 5 cortes de heno, y esto se consigue cubriendo el campo con agua de rio que se conduce al prado en la primavera, por medio de numerosísimas zanjas pequeñas; se ha notado eso tan ventajoso que suponiendo que un prado que no recibe este riego rinde 1,000 libras, otro á que se le introduce el agua rendirá de 4 á 5,000 libras. » El terreno desmontado j cercado como lo tenemos dicho, las ma- deras útiles apartadas y las demás vueltas carbón ó quemadas, así como las malezas, cuyas cenizas se esparcirán igualmente, entonces se dará una labor al terreno para unir y nivelarle lo mejor posible, atendiendo siempre á la disposición topográfica ; hecho eso se podrá sembrarle de tabaco, de maiz, de arroz, etc., según la naturaleza y la disposición especial del suelo ; después de sacada la cosecha, se le echará semillas de yerba de Guinea, mezcladas con otras de las gramíneas que mas apetecen los animales y que les hacen mayor provecho, mezclando con ellos como una cuarta parte de semillas leguminosas, tales como la alfarfa, trébol común, sulla ó esparcilla, porque además de ser para el ganado un alimento riquísimo, son abono para el suelo que estenuan mucho las gramíneas, y especial- mente la yerba de Guinea : en los parajes húmedos y hasta algo pantanosos, habrá de sembrarse la yerba del Para, gramínea que, además de ser para los animales un alimento magaífico, da mu- cho producto, tiene, por su lozana, continua é invasora vejetacion, la propiedad de dar mas firmeza á tales suelos y de volverlos en el intervalo de pocos años riquísimos y muy productivos; pero será necesario tener siempre mucho cuidado en evitar su contacto con los cañaverales, porque les invade con mayor facilidad, hace mucho perjuicio á la caña por su presencia y además multiplica los gastos, haciendo los desjerbos mucho mas repetidos, y es muy difícil aca- bar con ella y para eso es necesario arrancarla de manera que no quede en el suelo ningún trocito, y quemarlo todo; no se la debe 504 APÉNDICE 2^ dejar florecer nunca, ni por consiguiente hechar semillas. Ha}^ ade- más otra clase de praderas artificiales, son las que se hacen ordi- nariamente con yerba de Guinea, que se siembra para cortarla j emplearla como forraje : se las puede hacer también con maiz, que vuelto malojilla, como ya lo tenemos dicho, se espende en las ciu- dades para alimento de los caballos; se empleará también con ven- taja para tal objeto la caña de cintas, porque viene en terrenos malos, resiste bien á la seca v recibe dos cortes al año; rinde ade- más un forraje abundante y riquísimo en sustancias nutritivas para cualquiera clase de ganado; se las puede también formar con coix lacryma, con alfarfa y con esparcilla de España, según la clase de terreno que tuviere uno á su disposición. La alfarfa necesita un suelo profundo ó á lo menos que su sub- suelo sea bien permeable, porque sus raices, largas como de mas de un metro, sacan del sub-suelo una porción de su alimento; las tierras frías, húmedas siempre, ó las arcillosas fuertes, no le convienen: ese vejetal pide abonos calcáreos, como verbigracia, el yeso y la cal, lo que le conviene perfectamente, y con los cuales da mayor producto. Esa planta constituye un forraje magnífico y abundante, sea verde ó vuelto heno, ó después de desecado, lo que se deberla hacer como en Europa, bien que no hava nunca ningún invierno que atravesar, pero porque la seca, que es el azote de los paises cálidos en donde hay una primavera continua, y por consiguiente donde se encuentra mayor imprevisión, bien que se haya visto tantas veces al campe- sino contemplar con semblante que da lástima el estado miserable de sus ganados por causa de una seca horrorosa y prolongada que arrastra siempre en pos de sí las mayores pérdidas; pero apenas pa- sado el temporal ya todo se olvidó y ninguna medida se toma para remediar tal estado de causas, que se repite con demasiada frecuen- cia; tales praderas pueden dar un producto muy regular durante unos 5 ó 6 años , teniendo únicamente el cuidado de limpiar el terreno, como se suele hacer para la yerba de Guinea después de cada corte, especialmente si á los dos años de sembrada, por ejem- plo, se le echa cal ó 3'eso reducido á polvo, sea crudo, sea cocido, pero se ha de preferir este en los lugares donde uno puede propor- cionárselo con facilidad y barado, porque favorece mucho la vejeta- cion de todas las plantas leguminosas; se le hará mucho favor y tal- drá mas lozana. Después de una labor profunda y de un buen abo- no, si el terreno no es bastante rico, se entregará la semilla á la tierra en la primavera ó algo antes de la estación de las lluvias, es decir, en abril o mayo, se sembrará la semilla de amelga ú otras en línea recta, tapándola con el rastrillo ó con la grada volcada y ar- mada de ramas espiuosas; cuando la siembra haya alcanzado algu- nas pulgadas de alto, se deberá principiar á desyerbarla, repitiendo esta operación todas las veces que fuere necesario. FIN FE DE ERRATAS Pajina 3, lín. 42, en lugar de Desimidieas, léase Dismidieas . 5, lín. 33, en lugar de haa, léase han. 6, lín. 24, en lugar áepoh'gajia, léase polígona. 1, lín. 2T, en lugar de monosifornieas, léase moiv^sifonieas. 8, lín. 5, en lugar de espundias, léase csporídias. 9, lín. 39, en lugar de cepveces, léase veces. 13, lín. 18, en lugar de ^oospores, léase zoosporos. 18, lín. 35, en lugar áe peretechio, léeise peritecio. Id. lín. última, en lugar de sólido, léase salido. 22, lín. 39, en lugar de llenendo, léase llenando. 23, lín. 13, en lugar de amplexicante, léase amplexicaule . Id., lín. 21, en lugar de elaterios, léase elaterios. 24, en lugar de c/íí5(? 4, léase clase 6, por consiguiente las clases si- guientes han de llevar dos números mas que el indicado, por equivocación en la composición. 26, lÍQ. 3, en lugar de sagittafolia, léase sagittefolia. Id., lín. 24, en lugar de estreclay, léase estrecha y. Id., lín. 21, en lugar de ovalo, léase óvulo. Id., lín. 29, en lugar de hideniscente, léase indehiscente. 51, lín. 40, en lugar de 15", léase 15'". 52, lín. 30, en lugar de familia 1% léase familia 29. 53, lín. *7, en lugar de Jamacensis, léase Jamaicensis. 61, lín. 39, en lugar de siete nervios, léase siete nervias. 62, lín. 25, en lugar áe jm titos negros, léase puntitos negros. 64, lín. 42, en lugar de padescente, léase pubescente. 66, lín. 7, en lugar de ascendentales, léase ascendentes, 68, lín, 22, en lugar de P. Bredemeyeri. — P. Macrophylla, léase A. Brcdemeyeri. — A. Macrophylla, y así hasta fines del párrafo, porque se ha seguido á la equivocación por falta de atención de los cajistas. 70, lín. 15, en lugar de nequilaterales, léase inequilateraUs. 72, lín. 38, en lugar de ta lo, léase tallo. 76, lín. 23, en lugar de estío, léase está. 78, lín. 33, en lugar de cuyo, léase cuyos. 79, lín. 1, en lugar áepelitirojizas, léase pelitiesas y rojizas. 506 FÉ DE ERRATAS. Pajina 80, lín. 11, en lugar áe familia 39, led.se familia 39 bis. 83, lín. 16, en lugar de suhiüadas, léase subulados. 91, lín. 6, en lugar de volvar, léase valvar. 95, lín. 18, en lugar de retenidas, léase reunidos. 96, lín. 23, en lugar áefidfuráceas, lea&e ficrfurdceas. 97, lín, 23, en lugar de G. III, léase G. II, y en lugar de lasespigas, léase las espigas. Id., lín. 45, en lagar áe familia 46, léase 47 bis. 99, lín. 32, en lugar de sin ester es, léase sin estériles. 101, lín. 34, en lugar de anhmnbroso, léase herrumbroso. 104, lín. 47, en lugar de adherid, léase adherido. 106, lín. 8, en lugar de o 5 estilos 2 etc., léase 5 estilos 6% etc. 107, lín. 47, en lugar de despendicular, léase perpe?idictdar. Id., lín. 9, en lugar de aguza pas, léase aguzadas. 108, lín. 41, en lugar de absortos, léase abortos. 112, lín. 12, en lugar de Árederas, léase Anredera. 114, lín. 18, en lugar áe piriforme, léase pisiforme. 115, lín. 36, en lugar de Eiixulus, léase Euxolus. 119, lín. 7, eu lugar de taíiqíie, léase tabique. 127, lín. 24, en lugar de alternos, con lóbulos, léase alternos con los Ubulos, etc. 131, lín. 6, en lugar de snb solitarias, léase sub solitarios. 134, lín. 13, en lugar de panojos, léase panojas. 138, lín. 47, en lugar de capsular, léase cápsulas. 139, lín. 39, en lugar de atesado, léase aleznado. 140, lín. 9, en lugar áe paniciforos, léase pauciforos. Id., lín 36, en lugar de familia 61, léase 62 ¿¿>\ 141, lín. 15, en lugar de iromeras, léase isómeras. 142, lín. 21, en lugar de fa.milia 62, léase 62 ter. 144, lín. 17, en lugar áe pergulyrieas, léase pergularieas. 145, lín. 19, en lugar de e^í eriores, léase esteriores. Id., lín. 23, en lugar de Eusclepiadeas, léase Euasclepiadeas. 146, lín. 3, en lugar de paucifioros, léase paucifloros. 151, lín 9, en lugar de caliiznales, léase calizinales. 160, lín. 1, en lugar de ovalo-lanceolado, léase ovalo-lanceoladas . 161, lín. 27, en lugar de Rorajeas^ léase Bor ojeas. Id., lín. 33, en lugar de borrayo, léase borrago. 162, lín. 13, en lugar de coíí ?í7í¿i punta entera alampíñada , etc., léase co7i una punta, enteras, o2ariipiuad.as , etc. Id., lín. 37, en lugar de rupa, léase drupa. 163, lín. 18, en lugar de relejos, léase reflejos. 165, lín. 25, en lugar de of«? oblongas en espigas, etc., léase í?r¿í? oblongas ; flores en espigas, etc. 171, lín. 3, en lugar de ticn, léase tan. 174, lín. 21 en lugar de vertical, léase transversal. 176, lín. 35, en lugar de 6, 5'", léase 6-5"-2". 177, lín. 45, en lugar de peqades, léase peqados. 182, lín. 15, en lugar de 8'" d A'", léase 8" d 4". 189, lín. 4, en lugar de del toideas, léase deltoideas. 191, lín. 25, pn lugar de druputa, léase drupita. FÉ DE ERRATAS. 507 Pajina 195, lín. 31, en lugar de iguales, con el estilo, leB.se iguales con el estilo*. 208, lín. 49, en lugar de semlilas, léase semillas. 213, lín. 18, en lugar áe piríjino, ]éa.se. periji/io. 214, lín. 13, en lugar de entero posterior, léase antero-posterior . 216, lín. 15, en lugar áesiliciforme, léa^e silicuiforme. Id., lín. 35, en lugar de oriinhos, léase corirnhos. 219, lín. 5, en lugar de cofiledo nesinciimhentes, léase cotiledones inctcmbentes. 222, lín. 42, en lugar de t airarles, ■lés.^e valvares. 230, lín. 35, en lugar de Malvdoideas, léase Ma2voideas. 235, lín. 8, en lugar de tantas de cajitas, léase en tantas cajitas. 241, lín. 25, en lugar áe pedóncidos, \é^^e peciolos. 244, lín. 29, en lugar de toridas, léase torcidas. 249, lín. 35, en lugar áe Jlorescencia, léase injlorescencia. 260, lín. 34, en lugar de vueltos; and.roforo , léase vueltos andró- foro. Id., lín. 45, en lugar de muci forme., léase miciforme. 281, lín. 23, en lusrar de anqtisti folia, léase angustifolia. 271, lín. 13, en lugar de 1 '1í2 á 2, léase 1 lf2 d T. 272, lín. 35, en lugar de cliadeo, léase cliadec. 274, lín. 24, en lugar de liojas largas de cuyos, léase hojaslargo.s de 2 lt2-3-3 li2" solre 1 l|2-2 1]2" de ancho, cuyos. 279, lín. 50, en lugar de corpíilentos ; frondosos, léase corpidentcs, frondoso, etc. 282, lín. 10, en lugar de cuciiru, léase cururu. 284, lín. 27, en lugar de c??yo., léase con. Id., lín. 50, en lugar de pedicelos, estériles , léase pedicelos esté- riles. 285, lín. 46, en lugar de troforpermos, léase trofospermos. Id., lín. 49, en lugar de ¿xrf/o, léase arilo. 292, lín. 1, en lugar de enforrna, léase ^5 formado. Id., 35, en lugar de los lados laterales, léase los dos laterales. 293, lín. 9, en lugar áe pors, léase ^or. 296, lín. 30, en lugar de á lampiTiado, léase alamjnñado. 297, lín. 40, en lugar de ron, léase íO'/z.. Id., lín. 44, en lugar de fores Mancas en legumbre, léase flores bla7icas ; legtcmbre, etc. .300, lín. 13, en lugar de 1'", léase 1". 301, lín. 23, en lugar áe fruticuloso, léase fruticulosa. 305, lín. 8, en lugar de subagudos, léase siidagiidas. Id., lín. 16, en lugar de 2 1 12, léase 2, 1 li2. ' Id., lín. 26, en lugar de disjmestos, léase dispuestas. 306, lín. 1, en lugar de sobre 10 d S" , léase sobre 10 d 8'". 315, lín. 28, en lugar de scl.eroxipla, léase scleroxyla. 316, lín. 16, en lugar de ginoflo, léase ginóforo. 318, lín. 14, en lugar de 12", léase 12'", 322, lín. 17, en lugar de largos, léase largo, 325, lín. 47, en lugar de opacos, léase opacas. 329, lín. 45, en lugar de son, léase con. 508 FE DE ERRATAS. Pajina 332, lín. 28, en lugar de siliciforme, léase silicuiforme. 333, lín. 24, en lugar de deciduo, léase decidua. 335 337 384 389 1 390 393 399 405 408 409 413 415 422 450 lín. 21, en lugar de labiadas, léase lobuladas. lín. 21, en lugar de aovado-lanceoladas , léase aovado-lanceo- lados. 339, lín. 20, en lugar de sicaniay léase sican^. Id., lín. 22, en lugar de comiculala, léase corniculata. 346, lín. 7, en lugar de estrellados, léase estriados. 352, lín. 44, en lugar de ó..., léase 6 comprimido por los lados. 353, lín. 32, en lugar de didinamo, léase didirao. 355, lín. 43, en lugar de ansuho^ léase ausuho. Id. lín. 44, en lugar de Mouhey, léase Monhey. 356, lín. 1, en lugar de mimmsops, léase mimusops. 360, lín. 46, en lugar de tronce, léase tronico. 372, lín. 12, en lugar de verticulares, léase verticales. 373, lín. 20, en lugar de se hallan, léase se halla. lín 33, en lugar de par, léase por. lín. 37, en lugar de 15', léase 15". lín. 20, en lugar de verde seco 1,354, léase verde, seco es de 354. lín. 45, en lugar de copa blanco, léase capa blanco. lín. 11, en lugar de Espondias, léase Spondias. lín. 23, en lugar de suminisira, léase suministra. lín. 23, en lugar áejtiga,' léa^e yagua. lín. 31, en lugar de rogosa, léase rugosa. lín. 31, en ]uga,r de rojozo, léase rojizo. lín. 34, en lugar de sepodilla, léase sapodilla. lín. 13, en lugar de lojitudinales , léase lonjitudinales. lín. 25, en lugar de calcarra, léase calcárea. lín. 7, en lugar de avoca, léase aporca. Id., lín. 21, en lugar de canelones, léase camelones. Id., lín. 24, en lugar de canelón, léase camelon. 452, lín. 29-30, en lugar de fd cli, léase fácil. 453, lín. 30, en lugar de inslinan, léase inclinan. 454, lín. 8, en lugar de dispuestas, léase dispuestos. índice de las familias Abietíneas. Acantáceas. Agaricáceas. Algas. Alismáceas. Amarantáceas. Amarilidáceas. Amarilídeas. Amiridáceas. Amirídeas. Ampelídeas. Anacardiáceas. Anacárdieas. Anonáceas. Antidésmeas. Apiáceas. Apocináceas. Apocíneas. Aquifoliáceas. Aráceas. Aristoloquiáceas. Aristoloquíeas. Artocarpáceas. Asclepiadáceas. Asclepiádeas. Atriplíceas. Auranciáceas. B Balanofóreas. Baseláceas. ! i Pag- ' Baséleas. 111 Pag. Batid eas. 110 55 Begoniáceas. 333 186 Bignoniáceas. 183 14 Bitneriáceas. 245 1 Bixáceas. 212 53 Bixíneas. » 115 Bombáceas. 252 39 Borraj ín eas. 160 )) Biirseráceas. 287 289 Butneriáceas. 285 221 G 290 » Cácteas. 346 223 Cannáceas. 42 70 Caparidáceas. 214 351 Caparídeas. M 146 Caprifoliáceas. 127 /) Cario fíl eas. 349 205 Cedreláceas. 275 24 Celtídeas. 82 90 Cesalpíneas. 302 » Cicádeas. 56 80 Ciperáceas. 29 142 Clorantáceas. 57 » Clusiáceas. 228 108 Colchicáceas. 35 271 Combretáceas. 332 Comelíneas. 31 Compuestas. 119 Conferváceas. 5 94 Convolvuláceas. 154 111 Crasuláceas. 349 510 ÍNDICE DE LAS FAMILIA.*", D Crescencíeas. Crisobaláneas. Cruciferas. Cucurbitáceas Cupresíneas. Cusparíeas, Diatomáceas. Dilleniáceas. Dioscoreáceas. Diosmeas. Diospíreas. Dismidíeas. E Equisetáceas. Ericáceas. Eritroxyleas. Escrofulariáceas. Esmiláceas. Espondiáceas. Esterculiáceas. Euforbiáceas. F Fabáceas. Fitolacáceas. riorídeas. Eucoídeas. rag. ] 181 320 318 335 56 261 4 226 38 267 205 4 204 275 165 37 288 248 249 291 112 7 11 Hipocratáceas. Hipoxídeas. Hipoxíleas. Hongos. Homaliáceas. Homálifeas. Ilicíneas, Iridáceas. Ir ideas. Jazmíneas. Jugiandáceas. Ju.2lándeas. Labiadas. Labiatas. Lamiatas. Lauráceas. Leguminosas. Lemnáceas. Licoperdáceas'. Licopodiáceas. Liliáceas. Liquenáceas. Loáseas. Lobeliáceas. Loganiáceas. Lorantáceas. Pa,i. 284 22 14 13 223 205 38 190 87 » 195 » 97 291 97 15 22 35 18 339 118 140 94 Gencianáceas. 152 M Genciáneas. » Goodenoviáceas. 119 Magnoliáceas. 223 Gramíneas. 126 Malnijiáceas. 277 Granáteas. 239 Malváceas. 234 Guttíferas. 228 ^larcgraviáceas. 230 Meliáceas. 213 H' Menispermáceas. 221 Menispérmeas. » Heléchos. 20 Mimoseas. 312 Hepáticas. 19 Mioporáceas. 190 Hernandiáceas. 102 Miricáceas. 89 Hesperídeas. 271 Miristicáceas. 222 ÍNDICE DE LXñ FAMILTAS, 511 Miristíceas, Mirsináceas. Mirsíneas. N Nayádeas. Nelombóneas. Nictaiíneas. Ninfeáceas. Nopáleas, Olacíneas. Onagraríeas. Orquidáceas. Orquídeas. Oxalídeas. Palmeras. Pandanáceas. Papaveráceas. Papayaceas. Papilionáceas. Pasiflóreas. Pedaliáceas. Pedalíneas. Piperáceas. Pistiáceas. Plantajíneas. Plumbajíneas. Poligaláceas. Poligáleas. Poligonáceas. Potómeas. O Q Quenopod laceas. Qaenopódieas. R Ramnáceas. Ramneas. Renunculáceas. Pag. 999 Risofóreas. 202 Rosáceas. » Rubiáceas. Rutáceas. 52 220 Salicariáceas. 116 Sal i Carleas. 219 Salicíneas. 346 Balsoláceas. Sapindáceas. Sapotáceas. Sauvajésieas. 273 Sesámeas. 331 Simar úbeas. 43 Solanáceas. •o Soláneas. 262 Teofrásteas. S 14 Tifáceas. 13 Tilandsíeas. 219 Tiliáceas. 339 Timéleas. 292 Triquiliáceas. 340 Tropseoleas. 185 Turneráceas. 58 54 201 Umbelíferas. )) Ured incas. 260 Urticáceas. » Urtíceas. 103 52 Yalerianáceas Yaleriíneas. 108 Vaniiláceas. » Verbenáceas. Viníferas. Yiolariáceas. 285 226 Zantüxiláceas u V 331 320 127 268 329 » 89 108 279 207 210 185 265 165 203 25 37 230 102 273 264 344 251 15 70 12G » 50 IDO .¿o o 211 270 512 INDICK DE LAS FAMILIAr^. JZantoxflea¿. Zigofíleas. Zinjiberáceas. Zumaquíneas. Apéndice 1" ó noticia sobre las maderas útiles de las Pag. 270 268 42 290 Antillas Y algunas de la República de Venezuela. 354 Apéndice 2° 6 resumen a- nalítico de agricultura apropiada á los paises intei-tropicales. 417 FIN. Paris. — Imprenta ae i'oupart-Davyl y Ca,, calle du B;.c, 30. New York Botanical Carden Library QK99.G75V.1/2 ^ ^ . 9en Grosourdy, Rene de/El medico botánico cr III III I 3 5185 00057 3418