K LA HUERTA Y EL JARDÍN NOCIONES DE BOTANICA APLICADA Á LA HORTICULTURA Y Á LA JARDINERÍA POR EL DOCTOR JESÚS DÍAZ DE LEÓN PROFESOR DE HISTORIA. NATURAL EN EL INSTITUTO DE CIENCIAS DE AGUASCAL1ENTES BOCIO HONORARIO DE LA ‘ SOCIEDAD MEXICANA DZ OEOOHAKÍA Y ESTADISTICA » ; CORRESPONSAL I)E LA “ SOCIEDAD MEXICANA DK HISTORIA NATURAL w J UIEUm.O DD LA « IlOVAL AS1AT1C SOC1ETT OF GHEAT DR1TA1N ARD IllEt.AND », ETC. OBRA ESCRITA PARA LAS ESCUELAS PRIMARIAS DE AMBOS SEXOS Edición ilustrada con 147 grabados UNAM 20885 INSTITUTO DE GEOLOGÍA - CU LIBRERÍA DE LA V"* DE CIL BOTJRET PARÍS 23, Rué Visconti, 23 MÉXICO 14, Cinco de Mayo, 14 QK47 D43 UNAM INSTITUTO DE GEOLOGÍA - CU BIBLIOTECA \ N Z4 ' v>- %Tlr ¿¿ imprenta <:| -d LI3 Rer !a ¿r^y Y -5 ; I . * > ^ -JT" <*" ^ J i? b v> 1 ' LA HUERTA Y EL JARDÍN NOCIONES DE BOTÁNICA QUEDAN ASEGURADOS LOS DERECHOS DE PROPIEDAD CONFORME Á LA LEY N° 287. Brairie-le-Comte (Bélgica). — Imprenta de lá Vda de Ch. Bouret. LA HUERTA Y EL JARDÍN NOCIONES APLICADA Á LA HORTICULTURA Y Á LA JARDINERÍA POR EL DOCTOR JESÚS DÍAZ DE LEÓN PROFESOR DE IIISTOniA NATURAL EN EL INSTITUTO DE CIENCIAS DE AGUASCA MENTES •10 HONORARIO DE LA <■ SOCIEDAD MEXICANA DK GEOGRAFÍA Y ESTADISTICA » ; CORRESPONSAL DE LA « SOCIEDAD MEXICANA DK HISTORIA NATURAL »: MIEMBRO DE LA • BOYAL ASIATIC SOCIBTY OF GRKAT BRITAIN AND IRELAND », ETC. OBRA ESCRITA PARA LAS ESCUELAS PRIMARIAS DE AMBOS SEXOS Edición ilustrada con 147 grabados librería de LA V da PARÍS I 23, ruó Visconti, 23 j DE CU. BOURET MÉXICO , Cinco de Mayo, t i DONACION I (V. o p pr .".na ' -n 12 b L l3 Esta obra es propiedad del Autor. — Esta edición es propiedad del Editor. INTRODUCCIÓN Esta obra puede considerarse como el tercer grado en los estudios de agricultura que para el uso de las escuelas elementales hemos escrito, bien se les estime como obras de texto, bien se les destine como obras de lectura ó de premios escolares, en todo caso, juzgamos terminado nuestro propósito, no dejando por estudiar sino aquellas materias que en nuestro concepto carecen de importancia dada la índole de estas obras. Quien se haya penetrado de las materias que forman la doctrina elemental de los dos primeros grados, en los cuales nos hemos ocupado de explicar todo lo que á los grandes cultivos atañe, concediéndoles una muy particular atención al repoblado, cultivo y conservación de los bosques, así como ó la formación de prados arti- ficiales y la mejora de los naturales, comprenderá que debe terminar nuestra empresa con el estudio de los pequeños cultivos, que no por lo reducido de ellos son menos lucrativos y de menos interés que el que deman- dan los grandes. Los datos históricos nos dicen que en la infancia de las sociedades, cuando la distribución territorial no permitía los grandes cultivos y mucho menos que se 6 INTRODUCCIÓN. trabajase una gran extensión de terreno en provecho de un particular porque el único propietario del suelo era el Soberano ó el Estado, por lo menos los miembros de una familia podían cultivar su jardín ó su huerto, que si bien eran muy reducidos, satisfacían sus nece- sidades ó sus inclinaciones para obtener tales ó cuales productos hortícolas. La tradición Bíblica nos dice que Dios colocó á la primer pareja en un jardín muy bello en donde obte- nían sin trabajo alguno todos los frutos más deliciosos que les servían de regalo y de sustento, y esta, que nos parece la demostración histórica más ai alcance de la generalidad, nos autoriza para afirmar que bajo el punto de vista agrícola, el cultivo de los huertos es tenido en grande estima en todos los lugares del globo, y que á todo el mundo se le alcanza que si bien los grandes cultivos hacen ricos á los hacendados, los pequeños cultivos, sin halagar la ambición de los traba- jadores de los huertos y de los jardines, es un hecho que pueden asegurarles el sustento de sus familias, realizando el proverbio de comer los frutos de la tierra regados con el sudor del trabajo. El cultivo de los árboles frutales que demanden cui- dados especiales y cuyos frutos sean los más apreciados en los mercados del país ó tengan una grande expecta- tiva en la exportación del porvenir; el cultivo de las legumbres, hierbas y otros productos de hortaliza que forman el contingente obligado en la alimentación or-i diñaría y aun la extraordinaria, según nuestras cos- tumbres ; por último el cultivo de las ñores y de las plantas más apropiadas para los jardines particulares, forman la materia de esta tercera parte, que aunque vasta en su programa no lo será sino en todo aquello que sea de interés científico á la vez que de utilidad práctica. INTRODUCCIÓN. 7 Además, esta obra tiende á llenar el vacío que se haría notar en las escuelas de niñas si no se les dedicase al ramo ó ramos que á la mujer conviene saber, por formar un capítulo indispensable en su programa de la economía doméstica, pues una mujer instruida lo mismo debe saber cómo se adereza una remolacha para saborearla en la mesa, que cultivarla en el huerto para que se desarrolle jugosa y sana. (c El estudio de la Botánica, dice el D r Puron, es una fuente de los más dulces goces de la vida doméstica.. Da un interés incesante á los paseos por el campo, donde, si se conocen las propiedades y la naturaleza de los vegetales, no se puede atravesar un bosque, una campiña cultivada, una pradera, sin considerar con satisfacción las plantas, arbustos, árboles que se sabe distinguir, nombrar y clasificar. En los bosques, ca- da árbol tiene, por decirlo así, su- lengua, que la Botánica nos enseña á comprender : la encina secular es el maderamen de las construcciones urbanas ; el pino elevado es el mástil de la nave ; el haya habla de la llama cpie consuela durante el frío de los países helados; la palma recuerda alimento, bebida, habitación, em- barcación ; el maíz recuerda los bienes que presta su grano á la pobreza; el banano recuerda el pándelos pobres y el vestido de muchos. En los campos, cada planta cultivada nos recuerda el trabajo inteligente del hombre; en los prados, la menor hierba tiene su ense- ñanza; es la gran fuente de la riqueza agrícola, el ali- mento indispensable de los animales domésticos. » Bajo otro punto de vista, el estudio de la Botánica hace nacer y desarrolla el gusto de las flores, fuente de placeres para todas las edades » ( Botánica , por el D r Juan García Puron.) Entendido pues que esta obra está consagrada á las escuelas de ambos sexos y bajo el concepto de que las 8 INTRODUCCIÓN. niñas no habrán cursado los grados anteriores en donde se dan las nociones más indispensables de Botánica, nos vemos en la necesidad de repetir en la primera parte de este tercer grado unas generalidades de Botá- nica que puedan servir no sólo á las alumnas, sino también de guía a los profesores, aunque procuraremos ser lo más concisos que fuere posible. Aguascalientes, I o de Septiembre de 1897. El Autor. LA. HUERTA Y EL JARDÍN NOCIONES DE BOTÁNICA APLICADAS Á LA HORTICULTURA Y Á LA FLORICULTURA PRIMERA PARTE CAPÍTULO PRIMERO Los tejidos elementales de las plantas. En esle capílulo sólo indicáremos aquellos datos indis- pensables para entender las explicaciones relativas á las funciones de las plantas cuyo conocimiento es necesario al horticultor y al jardinero. E . • — Las plantas son seres organizados que carecen de sensibilidad y movimientos voluntarios, que toman del suelo ó de la atmósfera los materiales necesarios para su nutrición y que pueden propagar su misma especie en la superficie del globo por medio de las semillas. 2- — Un vegetal completo está formado por un eje comunmente cilindrico y dividido en dos secciones; una aérea llamada tallo y se ramifica más ó menos cubriéndose de hojas y llevando llores y frutos; la otra sección es la raíz que ordinariamente se hunde en el suelo y está desprovista de hojas, ramificándose unas veces, engrosando otras, pero siempre sirviendo de sostén al resto de la planta. El punto en que se separan el tallo y la raíz no siempre es fácil limitarlo con la simple vista, pero puede decirse que es 10 NOCIONES DE BOTÁNICA, aquel punió hinchado, situado al nivel del suelo, que forma el cuello 6 nudo vital de la plan La, habiendo recibido este nombre porque una sección en este punió ocasiona la muerte del vegetal. ' 2 - — Los elementos fundamentales de las plantas son tres : la celdilla, la fibra y el vaso. Muchos vegetales están formados únicamente por celdillas cuyo agrupamiento caracteriza el tejido celular. Los hongos que forman una • familia natural están formados exclusivamente de tejido celular y se llaman plantas celulares. De la celdilla derivan los demás tejidos. Las fibras son celdillas que se alargan en forma de huso, se espesan y se colocan de modo que se van adhiriendo por sus extremos y así í arman el tejido fibroso. Este tejido es fuerte, resistente, duro y lorma la madera y las parles duras de los vegetales. El vaso está formado por las celdillas que, colocándose unas sobre otras, reabsorben sus paredes de contacto y queda un tubo por el cual circula la savia. Ilay plantas for- madas solamente de tejido celular y vasos, por cuya razón se les llama celulo-vásculares. En el tejido celular se forman todos los principios que producen los vegetales, como las gomas, el azúcar, la fécula, los aceites grasos ó esenciales, los cristales, etc. *• " Celdillas. Haciendo un corte vertical en un trozo de caña de Castilla y luego sacando una lámina lo más delgado que fuere posible, se observarán, ayudándose de una lente, muchas cavidades de forma variable, son las celdillas, otros filamentos blancos formados por cuerpos fusiformes, son las fibras; y por último, unos sacos, cilin- dricos en los cuales circulan jugos vegetales, son los vasos. Las celdillas forman el tejido celular. Este tejido puedo compararse al agrupamiento de vesículas producidas en el agua de jabón soplando en ella con un tubo. Lo mismo que estas vesículas se comprimen á medida que aumenta el número, las celdillas se comprimen unas á otras y toman diversas formas geométricas, como poliedros, cubos, dode- caedros, etc. Como las celdillas no siempre se locan en Loda su super- ficie, dejan entre sus paredes algunos espacios llamados LOS TEJIDOS ELEMENTALES DE LAS PLANTAS. ti meatos. Si se observa un cesto conteniendo manzanas, y éstas las consideramos como celdillas, los huecos que dejan entre unas y otras las manzanas, serán los meatos. Si sacamos dos ó tres manzanas sin que el hueco que dejan lo ocupen otras manzanas, ese hueco es una lar/ana; así se llama el hueco que dejan algunas celdillas que desaparecen en el tejido celular [fig. I). Algunas veces las celdillas se endurecen al grado de dar idea de incrustaciones calcáreas, como se ve en el fruto del peral que en ■ la masa carnosa presenta esos en- durecimientos, habiéndose dado el nombre de peras petrosas á las que ofrecen estos endureci- mientos. s. — fv/sos. El tejido vascular es una derivación del ce- lular. Los vasos son canales cilindricos, membranosos, de paredes finas pero no lisas, sino que ofrecen el aspecto de cilindros rogados, puntuados , anillados, escalar') formes, debido á un espesamiento irregularen la membrana délas celdillas que los han formado, pues las mismas celdillas afectan esas turmas y las hay puntuadas, rcticidadas, vagadas, anulares, etc. Los vasos que conducen el látex, que quiere decir leche ó jugo propio de los vegetales, se llaman vasos lacticíleros y el jugo que los llena puede ser blanco como en la higuera, rojo en la sanguinaria, amarillo en la quelidonia. Estos vasos se distinguen délos de la savia en que son muy delgados y no tienen puntuaciones. — Fibras. Las celdillas se alargan, toman la forma de un huso, y á medida que envejecen sus paredes engruesan basta que desaparece la cavidad y queda un cuerpo sólido. Estas celdillas alargadas se pegan por los extremos y van formando un tejido resistente que más bien que fibroso debiera llamarse tejido leñoso. Las maderas duras como las del ébano, son formadas por libras enteramente endurecidas, en tanto que las maderas Fipr. 1. Lagunas del tejido celular. 12 NOCIONES DE BOTÁNICA. blandas ó blancas, como en el álamo, están formadas por fibras tiernas que no llegan á endurecerse del todo. Cuestionario. i. ¿Qué son las plantas? — 2. ¿Cómo está conformarlo un vegetal? — 3. ¿ Cuáles son los elementos fundamentales de las plantas ? — 4. ¿Qué clase de elementos son las celdillas? — ü. ¿Qué clase de ele- mentos son los vasos? — 6. ¿Qué clase de elementos son las fibras? NOTAS COMPLEMENTARIAS Utilidad del estudio de los tejidos elementales, especialmente del tejido celular. El tejido celular está formado por el conjunto de las celdillas ■vegetales. La celdilla es el elemento primordial de la organización vegetal. Una celdilla completa está constituida por una membrana en forma de vesícula redonda, ovoidea ó poliédrica, en cuyo interior se encuentra una materia granulosa llamada protoplasma. Generalmente las celdillas están formadas por un glóbulo de protoplasma que después se recubre de una membrana; así pues, la materia principal contenida cu las celdillas es el protoplasma del cual se derivan algunos otros principios. Contiene también gases como el oxígeuo y el ácido carbónico ; los cuerpos sólidos astán representados por la clorofila, el almidón y cristales de oxalato y carbonato de cal. El protoplasma es una materia azoada, constituida por granu- laciones de consistencia mucilaginosa, por cuya razón se le lia considerado como un principio análogo al sar coila de los animales. Eu el seno de esta masa tienen lugar los principales fenómenos de la vida vegetal, pues un grupo de celdillas se nutren, se desarro- llan, se reproducen, asimilan y transforman las sustancias que les sirven para su crecimiento y para el desarrollo de otras partes del vegetal. Lu una celdilla completa hay que considerar la membrana de cubierta que contiene en su interior el protoplasma y además un espesamiento en el seno de este llamado núcleo. Un huevo puede dar idea de una celdilla completa, siendo el cascarón la membrana de cubierta, el protoplasma la clara ó albúmina y el núcleo está representado por la yema, y lo mismo que en el huevo, en la celdilla es el núcleo ó la yema de la celdilla la parte más intere- sante de este elemento primordial. ios TEJIDOS ELEMENTALES DE LAS PLANTAS. 13 El núcleo es un cuerpo pequeño formado por una materia gra- nujienta análoga á la albúmina, y se baila situado unas veces en el centro del protoplasma y otras pegado á la pared de la celdilla. El núcleo es un verdadero germen ó el centro de la vida celular, pues además del papel importante que tiene cu la formación de los elementos primordiales, los pequeños gránulos que lo forman se transforman en pequeñas vesículas que á su vez se convierten en celulosa, almidón, clorofila y aleurona. La cloró/ila es la materia gelatinosa que contenida en el inte- rior do las celdillas imprime á las partes aéreas del vegetal el color verde. A la clorofila deben su color las hojas como lo indica su mismo nombre (]ue en griego quiere decir verde de la hoja (cloros, verde, y fillún hoja). En las celdillas la clorótila se baila bajo la forma de granitos muy linos llamados cromató foros, que quiere decir que llevan el color [croma, color, y foros, el que lleva). Los cromatóforos ó núcleos de clorofila contribuyen á la formación del almidón. Estos gránulos existen en todos los órganos del vegetal, pero variando de color : cu la raíz carecen de color, por eso jamás es verde y se dice que la raíz carece de clorólila : en las hojas son verdes, en las llores son amarillos, rojos, morados, etc. A estos estados especiales de los cromatóforos se les lia distinguido con nombres que. marcan su grado de evolución; así, cuando están incoloros se les llama leucoplastidas (de Umkós, blanco, y plastés, el que forma); si son verdes, cloroplastidas ; si amarillos, jantoplas- tidas; y si rojos, eritroplastidas. La clorólila, químicamente considerada, es un principio inme- diato formado de oxígeno, hidrógeno, ázoe, carbono y fierro; su fórmula química es C la H 9 Az0 8 fierro cu proporción indetermi- nada. Parece que la coloración verde es debida á la combina- ción do dos principios que en las hojas secas se encuentran aisla- dos, el uno se llama filojantina ó materia amarilla de la hoja, y la otra so llama filocianina ó materia azul de la hoja. En el otoño co- mienza á desaparecer la iilocianiua y por eso las hojas se ponen amarillas, pues predomina la íilojantina. Es de advertir que noto- dos los colores y matices que ofrecen los pétalos de las llores, son debidos á transformaciones de la clorofila, pues las celdillas de los pétalos contienen también líquidos de diversos colores, produ- ciéndose el blanco por una pequeña cantidad de aire contenido en el tejido celular. Para la tormación de la clorofila es preciso que la planta reciba la acción directa de la luz y la influencia de una temperatura con- veniente, pues se puede observar que los vegetales desarrollados cu la oscuridad están pálidos, como si estuvieran afectados de cío- ^ NOCIONES DE BOTÁNICA. í'osis vegetal. La acción de la luz y del calor Ies devuelve su lozanía y mas si se les riega con una solución de alguna sal soluble de lierro. El almidón es otro de los elementos contenidos en el interior de las celdillas, apareciendo bajo la forma de un núcleo que se va rodeando do capas concéntricas de espesor desigual y que pre- sen an una depresión llamada hilo en el punto donde existió el uc eo. ajo, a influencia del calor y do la luz los cromalúforos producen granulos de almidón que se disuelven en el protoplasma bajo la acción de la potasa ó la cal y en esc estado de disolución es tiansportado de unos órganos á otros por los vasos vegetales basla encontrarse en presencia de los leucoplástidas, que convier- en a su estado primitivo á los granulos de almidón ó bien bajo a influencia de un fermento lo transforman en una materia azu- carada llamada glucosa, como se observa en el acumulo de eslas sustancias en algunas raíces y frutos. Ln elemento que siempre acompaña al almidón es Ja alcurona que se considera como una transformación de la fécula ó almidón, y por consiguiente como un derivado indirecto del núcleo. Exisle en abundancia en las semillas maduras, en el embrión, en la cor- teza, en los rayos medulares y en el estudie medular; se presenta bajóla forma do granos redondeados ó elipsoides, lisos ó ami- gados, incoloros, conteniendo granos de fosfato de magnesia ó cal y cris tades de oxalalo de cal. La aleurona es como la grasa en los animales,, pues a vegetal le sirve de alimento de reserva para la nutrición intima de sus tejidos ó bien para el desarrollo del embrión en el periodo de germinación. Como un derivado importante del protoplasma hay que señalar e tanmo principio astringente que existe en abundancia en las plantas desproynslas de almidón. Se transforma en glucosa, como v desmán f IUl ? q '! e aD !. 0S dc , ma combinaciones entre los minerales absorbidos por la planta se cristalizan en el pruloplasma bajo diversos aspectos. La sílice que tanto abunda en la naturaleza, se encuentra también en la celdilla, pero especialmente formando incrustaciones en algunos tallos, como sucede en la paja do las gramíneas, y á cuya sustancia es debido el brillo así como la friabilidad de ese órgano. * + * La fibra es una célula transformada. Durante el desarrollo se alarga más ó menos, la pared engruesa hasta reducir completa- mente la cavidad y nuevas capas que la van cubriendo exterior- monte le dan mayor solidez. La libra contribuye á formar el tejido llbroso ó leñoso que se encuentra en la armazón ó esqueleto del vegetal, en el tallo, ramas, pecíolos, pedúnculos y nervaduras de las hojas. Como la libra es una modificación de la celdilla presenta los mismos caracteres que el elemento de donde proviene. Cuando las libras toman la figura de un buso se Jes llama clostros y para formar un tejido resistente y firme se van adhiriendo por sus extremos. Las fibras textiles que dan algunas plantas como el cáñamo, el lino, están formadas únicamente de tejido libróse. * DI tejido vascular proviene de otra modificación que sufren las celdillas. Este tejido puede dividirse en dos grandes secciones tanto por la forma especial de los canales como por los distintos caracteres del Iluido que circula por ellos. La primera sección comprende los vasos aéreos ó comunes y la segunda los vosos laclici foros. Se ha dado el nombre de vasos aéreos al primer grupo porque en determinadas estaciones contienen aire que la planta utiliza para su respiración, pero también sirven para la circulación de la savia. Como estos vasos resultan de la reabsorción de los tabiques ó sea de las paredes de adherencia recíproca en una serie de cel- dillas colocadas unas sobro otras, do aquí resulta que el tubo for- mado así tiene un calibre variable en relación con las celdillas que lian contribuido á su formación. Algunos vasos como las tráqueas están formados por un tubo membranoso, el cual parece envuelto poruña cinta en espiral. Teniendo en cuenta la estructura de los vasos ordinarios, se lian dividido en dos categorías; á la primera pertenecen las tráqueas , y á la segunda se refieren las falsas trá- queas cuyos tubos presentan rayas transversales ó puntuaciones ó 10 NOCIONES DE BOTÁNICA, mallas irregulares, por lo que se designan con el nombre de vasos rayados, punteados ó reticulados. Algunos vasos tienen una forma prismática. Las tráqueas existen generalmente en las libras radi- cales de algunas plantas, en las llores, hojas, y en las capas inter- nas del cuerpo leñoso. Las falsas tráqueas existen en los linces fibrosos del cuerpo leñoso. En la estación de la primavera se encuentran llenos de savia, y cuando la circulación de este Iluido, comienza á disminuir se llenan los vasos de aire que la planta utiliza para su respiración. Los vasos lactici foros forman la segunda sección del tejido vas- cular. Estos vasos forman redes ó mallas irregulares en el seno del tejido celular y sirven para la circulación del látex ó sea el jugo propio que elabora cada especie vegetal. Los lucticíferos se forman por hileras de celdillas cuyas paredes de contacto se reabsorben ó bien provienen de redes celulares que imprimen un aspecto reticulado á los canales como se observa en la figura 1“. El látex es un jugo incoloro en unas plantas y en otras os de color rojo, blanco, amarillo ó verde. Las propiedades de este jugo, son muy variables, puede ser purgante, alimenticio, venenoso, cáustico, narcótico, etc. El cauchuc proviene de este jugo. En el tejido vascular se observa también una especie de sacos formados en las paredes de los tubos, llamados tijlos que en mi concepto son debidos á presiones ejercidas por el líquido en el interior, y que determinan ampollamientos en la pared del tubo hasta constituir verdaderos aneurismas saciformes. El tylo no es sino un aneurisma ó dilatacción de los vasos vegetales. (L) r D. de L.) Hemos dicho que los vasos y las fibras no son sino modifica- ciones de las celdillas y por lo tanto éstas deben considerarse como los elementos histológicos fundamentales de los tejidos orgá- nicos de los vegetales. En apoyo de esta aserción debe tenerse en cuenta que la com- posición química de las paredes de la celdilla, de la fibra y del vaso es siempre la misma y están constituidas por una sustancia orgánica llamada celulosa cuya composición se expresa por la fór- mula C 13 H 10 O 10 que indica, doce equivalentes de carbono, diez de hidrógeno y diez de oxígeno. Esta sustancia bajo la acción de los ácidos so transforma en (lextrina la que á su vez se convierte en glucosa ó azúcar vegetal de naturaleza amilácea. LA. RAÍZ. 17 CAPÍTULO SEGUNDO La raíz. ? ■ — La raíz es la parte del vegetal que crece en sentido opuesto al del tallo y ordinariamente se encuentra oculta en la tierra, puesto que una de sus principales funciones es la de dar fijeza á la planta en el punto donde tiene que vivir y desarrollarse. También sirve la raíz para absorber del suelo la savia brula, designándose con este nombre el agua car- gada de sales solubles y que todas sirven al ve- getal para la nutrición de sus tejidos. La raíz nunca lleva ho- jas, ni toma color verde como el tallo, aun cuan- do viva en la atmósfera como sucede con las rai- ces adventicias. También se distingue del tallo en que no tiene medula cen- tral bien aparente ni tiene tráqueas en su tejido. — La raíz vive den- tro déla tierra y el tallo en la almos lera formando así dos sistemas, uno as- cendente ó aéreo y otro ' descendente ó subterrá- neo. El punto de separa- ción de estos sistemas se llama nudo ó ciadlo vital y se admite, para facilitar el estudio, que la raíz se separa del tallo al nivel del suelo [fig. 2), pues no es siempre fácil el señalar el punto preciso del cuello vital en la mayoría de los vegetales. F r ■ 2. — Planta en la cual se puede señalar el cuello vilnl al nivel del suelo, punto de separación del sistema ascendente del sis- tema descendente. 287 2 18 NOCIONES DE BOTÁNICA. ». — Las raíces se dividen para su estudio en tros partes principales : el cuerpo, el cuello y la cabellera ó raicillas. El cuello ó nudo vital es el punto, algunas veces ideal y otras veces marcado por un anillo epidérmico, que separa la raíz del tallo. Se le llama nudo vital, porque corlado un vegetal en este punto muere. El cuerpo llamado también cepa, es la parte media ó cén- trica de la raíz, cuyos caracteres se conocerán al estudiar la forma de las raíces. La cabellera está formada por fibras más ó menos numerosas, delgadas ó gruesas, y que llevan en sus extremos las espongiolas y los pelos absorbentes. Si se examina un grano de trigo en los primeros días de su germinación, se en- contrará en las modificaciones que lia sufrido, que lleva un talluelo g (////. 3), y muchas raicillas cubiertas de pelos absorbentes. El cuello de estas raicillas puede limitarse idealmente en el punto que se separan del talluelo siguiendo cada órgano un crecimiento opuesto. — La raíz se divide, atendiendo á su forma, en tres categorías princi- pales. I. Raíz fasciculada es aquella que del contorno del cuello vital [fig. 2 y 3), y del cuerpo de la raíz principal que es la que continúa ó prolonga directamente el tallo formando el axoflto (eje vegetal, es decir, tallo y raíz), nacen otras mu- chas raíces delgadas, largas, resistentes, elásticas, formando como un penacho de raicillas según puede verse en la cebada (Iíorcleum vulgare) . F. Gramíneas 1 . Fig. 3. — Grano de íngo en germinación. — G, geni tila que dará naci- miento al tullo; r. r. r..., raicillas con pelos absorbentes. 1. Con el objeto de que los alumnos no pierdan la costumbre del tecni- cismo científico, daremos los nombres botánicos do algunas plantas y la Familia á que perlenecen sin recargar mucho este tecnicismo para" no hacerlo pesado. LA RAÍZ. 19 IF. Raíz pivotante es aquella cuya forma se asemeja á la de uu trompo ó á la de un huso por cuya razón también se llaman fusiformes. Esta raíz es de consistencia carnosa, friable, con bastantes jugos : su color es variable, blanco sucio, lechoso, amarillo, naranjado, morado, etc., con pequeñas rai- cillas en la superficie, pudiendo servir de tipo el nabo (Jig. i) ó la zanahoria {Daucus enrolla). F. Cruciferas. III. Raíz tuberosa (f/g. o) es aquella que ofrece unos engrasamientos en el espesor de sus raíces fibrosas, y toman una forma globulosa ó fusiforme, duras, cubiertas con una epidermis de color oscuro, como se puede observar en el orquis y en las raíces, que la señoras llaman camotes, de mu- chas plantas, como la dahlia (Da/ilia. varía- bilis). Tribu de las Asleroideas. F. Com- puestas. Hay otra forma de raíz llamada cola de zorra que se presenta en las plantas acuá- ticas, que no es sino una raíz fasciculada muy larga cuyas raicillas Holán en las aguas. n d . — Las raicillas llevan en el extremo una especie de cofia ó de capuchón que protege á las celdillas tiernas que la for- man, á la voz que le permite hacer el oficio de taladro y perforar el terreno para irse alargando la raíz. Este capuchón es bastante duro y lia recibido el nombre de cofia ó coleoriza (estuche de la raíz). Véase figura 6, II, a. El extremo de las raicillas no siempre se vé cuando se arranca una planta del suelo, porque siendo órganos muy delicados se rompen. Para observar los extremos do las raicillas se elige una planta en los primeros meses de su crecimiento y se escarba al rededor sacándola con lodo y cepellón. Se pone luego en agua para que arrastre Fif,. 4. — Raíz fusiforme del nabo. 20 NOCIONES DE BOTANICA. toda la tierra y deje limpias las raicillas para estudiarlas. 13. Los pelos absorbentes ( fig . 6, II, c, n, I, a) iorma un grupo de pelilos finos, delicados, transparentes, que ro- dean la extremidad de la raíz un poco arriba de la cofia ocupando un corto espacio. Fig. 6. — Raicillas de maíz, mos- trando los pelos absorbentes. — I. Raíz primitiva con pelos ab- sorbentes, A; cuello, B. II. Raíz aumentada. A, raicilla desnuda ; B, cofia ó coleoriza ; G. D, pelos absorbentes. 13- — Hav otra clase de raíces que nacen en la parte su- perior del cuello, y se llaman raíces adventicias como se ve en el maíz (Zea maíz). F. Gramíneas. Las raíces adventicias pueden nacer en cualquier punto del tallo ó de las ramas y tienen diversas funciones en rela- ción con la vida del vegetal. En las plantas trepadoras como la yedra las raíces adventicias se transforman en garras ó garfios que premiten al vegetal irse afirmando sobre otras plantas ú objetos que encuentren á su paso [fig. 7), LA RAÍZ. 21 y en oirás sirven de rodrigones que permiten á las ramas seguir su crecimiento sin caer al suelo como sucede en la higuera india, ó bien aumentar sus medios de nutrición como en la primavera (fig. 8). En algunas plantas como la cuscuta, las raíces adventi- cias se transforman en chupaderas como las ventosas de la sanguijuela. M . — Las raíces fibrosas que no es- tán en relación con el desarrollo de la planta, se ven auxi- liadas en sus fun- ciones de dar fijeza al vegetal en el suelo por medio de las raíces adventicias que vienen á hacer el oficio de cuerdas que protegen al tallo contra los vientos pues sin este recurso lo acostarían en tierra y aun desenraizarían la planta. Este fenómeno es muy ostensible en muchas gramíneas pero muy especialmente en el maíz. Fig. S. — lluiccs adventicias de la primavera. Cuestionario. 7. ¿ Qué es la raíz? — S. ¿Qué es el cuello vital? — !). ¿Cómo se divide la raíz para su estudio ? — 10. ¿ Cómo se clasifica la raíz aten- diendo á su forma? — 11. ¿Cuál es la estructura de las raicillas? — 12. ¿ Qué son pelos absorbentes? — 13. ¿Qué son raíces adventicias? — 14. ¿Qué objeto tienen las raíces adventicias? OBSERVACIONES COMPLEMENTARIAS Las raíces carecen do elegancia en su aspecto, quizá porque la naturaleza las lia destinado á vivir enterradas ó mejor diremos que por sus funciones de utilidad, puesto que es el principal agente de la nutrición del vegetal. Las raíces toman del suelo el agua y las sales necesarias para su alimentación y por esto se lia llamado savia bruta al agua 22 NOCIONES DE BOTÁNICA, de riego tan necesaria á las plantas. El agua de riego, aunque tiene sales en más ó menos cantidad, no es bastante por si sola para alimentar un vegetal : quiere decir esto que la planta loma del suelo muchos principios que son transportados por el agua de los riegos hasta ponerse cu contacto con la cabellera y allí es absorbida la savia bruta por los pelos absorbentes de las raicillas. Hay vegetales que carecen de raíces, oíros que viven en terrenos muy áridos en donde la savia bruta se reduce á una cantidad insig- nificante que no bastaría paro alimentar á esas plantas, si las hojas no lomasen del aire el carbono necesario para la confección de sus tejidos. La respiración sustituye en parte á la absorción de las raíces. La estructura de las raíces está en relación con la organización de la [ilauta. Aquellos vegetales que tienen una nutrición muy activa desarrollan pronto sus raíces, por lo general fasciculadas, y perforan el suelo cu todas direcciones en busca de alimento. Si las capas superficiales del suelo son muy estériles, la raíz prin- cipal y muchas secundarias se hunden profundamente oa la tierra hasta alcanzar la humedad del subsuelo. Esto puede observarse en los tajos recién abiertos, en las barrancas naturales, en donde la longitud de la raíces es muchísimo mayor que el lamaíio de la planta á que pertenecen. Estas plantas no perjudican á sus vecinas, si éstas tienen raíces pivolantcs ó tuberosas. Las raíces pivolantcs sou verdaderos almacenos de materiales nutiitivos que va acumulando el vegetal para su propia conser- vación. Estas plantas son bianuales : durante el primer a fio hacen provisión de alimento en su raíz que engruesa más ó menos, y en el segundo florecen y fructifican. Estas raíces (pivolantcs) son las que dan productos en grande escala á la industria pues de algunas se obtiene azúcar y alcohol en abundancia. Las raíces tuberosas no son monos importantes por sus productos, pues de ellas se obtienen las distintas féculas que día á día van extendiéndose eu el comercio y se usan en la alimentación. Las raíces pivolantcs proveen de abundante forraje á los establos. Oirás raíces se usan en la medicina como la ilc jalapa, la de ruibaibo, la do historia; también la tintorería aprovecha algunas, pues su uso va decayendo con la introducción délas anilinas, pero estas ultimas no dan colores firmes como los que se obtienen de los vegetales. El conocimiento de la raíz es de importancia en agricultura y en jardinería» Ll trasplante de una planta os delicado porque para asegurar el éxito es indispensable procurar que no se maltraten Jas raicillas EL TALLO. 23 ni se trocen los extremos de éstas que son los que llevan los pelos absorbentes. Se cuida mucho del aire esta parte del vegetal en el trasplante, porque los pelos absorbentes se secan con facilidad y pierden sus propiedades fisiológicas, por esto se conserva la raíz con su cepellón ó gleba. El mejor trasplante es como el que verifican las señoras con las plantas de maceta, que sólo rompen un tiesto y sin remover más tierra que la superabundante, ponen la planta en otro tiesto y lo rellenan con tierra. Así no sufre nada la raíz. Cuando so lia estropeado algo la raíz, es preciso cortar algunas ramas, procurando que baya proporción cu los dos sistemas del vegetal. En las plantas que tienen su asiento en el suelo se debe cuidar que alternen las de diversas clases de. raíces para que no se per- judiquen unas ú otras, pues de este modo las ladees pivotautes que son muy voraces roban todo el alimento de las capas superficiales del suelo y no perjudican á las raíces fasciculadas que pueden hundirse á las capas más profundas en busca de la savia bruta. CAPÍTULO TERCERO El tallo. 115. — El tullo es la parle del eje vegetal que crece en sentido opuesto á la raíz y que se ramifica por medio de yemas que nacen en la axila de las hojas, llevando en sus ramificaciones las llores y los frutos. Por el tallo circula la savia que va de la raíz á lodos los órganos del vegetal. 145 . — El tallo es la continuación del talludo del embrión y puede ser simple , es decir, formado por un solo eje ascen- dente; ó bien ramificado si se divide en ramas, ramos, ramillos, etc., que mejor debieran llamarse ejes secunda- rios, terciarios, etc., según el número de orden que cofres- ponda á sus divisiones. ií. — Si se comparan las plantas que forman la. llora de una región determinada, que sea muy variada, se distin- guirán á primera vista muchas clases de tallos que alen- 24 NOCIONES DE BOTÁNICA. dicnclo á su forma so pueden reducir á las especies siguienles : 1 * El tronco ( fig . 9), que es una especie de cono más ó menos alargado y del cual se desprenden las ramas ó ejes secundarios que á su vez se van sub- dividiendo en mu- chos ejes. Esle tallo es característico de los árboles foresta- les, que general- mente pertenecen al tipo de los dicoti- ledones. Malva ar- borescente (Maloa arbórea). F. Malvá- ceas. 2 a La caña , es un tallo sencillo, her- báceo, cilindrico, que comunmente lleva nudos ó arti- culaciones de trecho en trecho que es donde nacen las ho- jas como se observa en el maíz. 3 a La cañuda , es un tallo anguloso, trígono, no tiene nudos, y la hoja tiene una vaina entera. Ejemplo, el tule ( Cypcrus aspan). F. Ci- peráceas. 4 a El estípite (fie/. 10), es un tallo cilindrico, esbelto, que lleva en su extremo, bastante alto, un abanico de hojas muy desarrolladas y entre las cuales aparecen las llores y los 1 rulos. Ejemplo, palma yuca (Iucca gloriosa). F. Asfode- láceas. 3 a El tallo envainado formado por el pecíolo de las hojas, que van enrollándose y cubriéndose unas á otras como se vé en el plátano (Musa paradisiaca). F. Musáceas. 6 a El escupo , que es más bien un pedúnculo, pues está Fi". 9. El tallo de la encina es un tronco de forma cónica. 1 ? Fig. 10. — Palmera : ejemplo de tallo recto. ÉL TALLÓ. 28 formado por una vara larga, sin hojas, que parle de la raíz y termina en un ramillete de llores como en el áloes, agapanto. 7 a El cálamo , que es una caña llueca, ofreciendo los mismos ca- racteres que ésta, diferenciándose sólo por la solidez, como se vé en el trigo (Trilicwn salivitm). F. Gramíneas. i S. — Además de los tallos aé- reos existen otros que se desarro- llan en el interior del suelo y por cuyo motivo se les llama tallos subterráneos. Estos tallos se pue- den reducir á tres clases princi- pales : el rizoma, el bulbo y el tu- bérculo. ns>. — El rizoma es un tallo que tiene su origen también en el talluelo ó plúmula del embrión, pero en lugar de crecer y desarrollarse en la atmósfera se intro- duce bajo la tierra, donde vienen cada año nuevas yemas que se desarrollan en tallos aéreos. En esta clase de tallos se observan princi- palmente las raíces adventicias cuya ex- pansión es tan nece- saria para la vida del vegetal. El lino, el sello de Salomón, el polipodio macho, el carex, ofrecen tipos de rizomas [fig. II). 30. — El bulbo es un vegetal en estado rudimentario, es L'lg. Ptncvolj» 11. — Tallo subterráneo de carex llevando ramas aéreas 2 , 3, 4. J Fig. 12. — Cebolla de jacinto partida por la mitad. gg nociones de botánica. una yema que por su desarrollo da nacimiento a otro vege- tal Un bulbo se compone de un cuerpo carnoso llamado platillo ó disco; éste es un tallo aplastado que por su cara 1 - superior da inserción á unas expansiones membranosas ó escamosas que son hojas transformadas y por la cara interior se cubre de fibras radicales. Según la dispo- sición de las escamas se distinguen tres clases de bulbos : tunicados, escamosos y sólidos. . El bulbo tunicado cuyo tipo puede ser la cebolla comestible, tiene sus escamas formadas de una sola pieza y van recu- briéndose totalmente unas con otras (fia. 12). . , El bulbo escamoso cuyo tipo puede ser el de la azucena, presenta sus escamas dispuestas como las lejas de un tejado que se l een nen mi perfectamente y sólo por un lado. El bulbo sólido es aquel cuyo platillo adquiere un gran volumen, quedándo las escamas reducidas á membranas i e ga- rfas, que parecen formar como la corteza del platillo : tal disposición se observa en el azafrán y el colchico {fig.lf® b " lb ° es sencillo cuando está aislado, y com- puesto cuando varios bulbillos foiman un grupo como se observa en el ajo. 31 . — Los tubérculos son verdaderos tallos subterráneos que adquieren un vo- lumen considerable por el acopio ce sus- tancias feculentas. Los tubeicu os pie- senlan unos hundimientos amar ajos en cuyo fondo se insertan unas yemas sirven para desarrollar tallos) UL * ‘ _ teniendo así la vida de otros uue ' r viduos. Ejemplo del tubércu o 1 c o su g®. — Atendiendo á su figura el tallo puede • , Fig. Bulbo de ozafrdn. EL TALLO. 27 como cuando so presen ! a sin ángulos en toda su extensión - comprimido , si tiene el aspecto de un cilindro comprimido; anguloso, si presenta ángulos salientes en el sentido longi- tudinal como el tule. 3:e ;_ J1 °r el aspecto de su superficie el tallo puede ser: lampino, cuando es liso en toda su extensión, como la fu- maria (. Fumaria officinalis), F. Fumariacias ; velloso, el que tiene pelos suaves semejantes al vello, como el beleño (. Ihjos - ciamos niger), F. Solanáceas ; peloso , cuando tiene pelos largos y resistentes como la amapola (■ Pupuocr vincas) , F. Papaverá- ceas ; cerdoso, si tiene pelos du- ros como la cerda, ejemplo, la borraja (. Borrago officinalis), F. Borragíneas ; borroso, el que está cubierto de una borra suave como en el marrubio [Marru- biinn vulgare), F. Labiadas ; glauco, el que parece estar cubierto por una capa de polvo. Ej. piñoncillo ( Euphorbia la t gris), F. Euforbiáceas; espi- noso, el que tiene espinas como el mesquile [Mimosa nilo- lica), 1'. Leguminosas; rilado, el que presenta membranas longitudinales como el lampote (. Hrliuni/nts a/alus), F. Si- nantéreas; articulado, el que de trecho en trecho presenta algunos nudos como si estuviese articulado, ejemplo, el cla- vel [Dianthus cargophg llus), F. CarMleas, Cuestionario. l.i. ¿Qué es el tallo? lfi. ¿Cuál es el origen del tallo? — 17. ¿Cuántas clases hay de tallos atendiendo á su forma? — 18. ¿Cuántas clases de tallos Subterráneos hay? — 19. ¿ Qué es un rizoma ? — 20. ¿Qué es un bulbo ? — ¿Cómo so divide para su estudio? — ¿Cuántas clases de bulbos liav? — 21. ¿Que son los tubérculos'.' — 22. ¿Cómo se considera el tallo con res- pecto ásu figura ? — 23. ¿Cómo se clasifica el tallo atendiendo á su aspecto? EXPLICACIONES COM ELEMENTARIAS RELATIVAS AL TALLO _ h" las árboles de los bosques y do los jardines, así como ios pinos de las serranías ó las palmeras del desierto, el tallo imprime Fig. t i. — Patata con un ojo desarrollado en tallo y con raíces. 28 NOCIONES DE BOTÁNICA, por su rectitud, su mayor ó menor elevación algo do muda ma- jestad á los vegetales, por cuya razón esta clase de tallos que se elevan verticalmente se les llama erguidos. Si el tallo es muy elevado y no tiene bastante fuerza para sostenerse erguido se inclinad encorva hacia su vértice y por esto se le llama inclinado. Algunas veces la inclinación es tal que se acuesta, y si es muy prolongado entonces se arrastra por el suelo, arrojando entonces, de trecho en trecho, raíces adventicias que lo fijan como se ve cu la fresa (flg. lo), recibiendo el nombre de rastreros esta clase do tallos. Hay plantas que tienen un tallo muy delgado y de una longitud enorme, y que lejos de arrastrarse por tierra, tienden á elevarse en el seno de la atmósfera para tomar toda la luz y todo el aire necesarios para sus funciones vigorosas de crecimiento. Estas plantas tienen los medios para realizar su propósito, pues poseen unos órganos llamados urilos que son como las manos que la naturaleza les ha dado para que puedan trepar á todas parles, y por esto se llaman trepadoras las plantas que como la vid, el chí- charo [fig. 47), etc., poseen los medios necesarios para trepar sobre otras plantas ó sobre cualquier otro objeto. En la clemátide ios pecíolos se desarrollan bastante para hacer el papel de. urilos. También son raíces adventicias las encargadas de transformarse en urilos para falicitar el ascenso del vegetal como se ve en la yedra (/ig. 7) en la cual son verdaderos garfios que permiten sostener el peso de la planta. Muchas plantas ascienden sobre otras sin nece- sidad de apéndices que las sostengan, simplemente enroscándose al rededor de los tallos ó ramas de otros individuos más fuertes que estas trepadoras. La particularidad de estas plantas es que siempre se enrollan en el mismo sentido según la especie, así el EL TALLO. 29 frijol so enrosca de derecha á izquierda y el lúpulo do izquierda á derecha. El l:»llo ofrece tres especies según su consistencia y se relaciona con una clasificación de los vegetales. Puede ser herbáceo, tierno, friable y pertenece á todas las hierbas en general; puede ser más resistente poro siempre quebradizo y caracteriza el tallo de los arbustos, subarbustos, plantas de jardín delicadas; por último el tallo duro, leñoso que es propio de los árboles y arbustos leñosos. El tallo herbáceo es propio de las hierbas anuales, el subleñoso de las plantas que renuevan sus ramas herbáceas anualmente, v el tallo leñoso (pie es perenne y ca- racteriza los árboles forestales, frutales y de ornato. La estructura del tallo varía según que se considere en las plantas dicotiledóneas ó en las monocotiledóncas. Si se observa la sección trans- versal de un tronco, se notará que está formado por varias ca- pas eoucéulrieas que fundidas en una masa común dan á la ma- dera su mayor ó menor consis- tencia {fig. 19). En esa sección se distinguirán siempre tres re- giones caractcríslicas : una central, es la medula; otra exte- rior, es la corteza, y la intermedia que es el cuerpo leñoso ó madera. La medula forma el eje del tallo . Está formada por una aglo- meración de tejido celular cuyo aspecto varía con la edad del ve- gotal; henchida do jugos y de color verdoso en las plantas tiernas, es incolora ó seca en los tallos viejos. La corteza es la parle del tallo que tiene una estructura más complicada. Del exterior á la parte central so encuentra una mem- brana transparente, llena de estomas ó bocas aéreas para la respi- ración del vegetal : lisa y lustrosa en las ramas tiernas, está seca y desgarrada en los troncos viejos, esta membrana es la epidermis. Debajo de la epidermis hay una membrana celular que en algunos vegetales adquiere un gran desarrollo y produce el corcho, es la cubierta suberosa. Luego sigue la envoltura herbácea, de color verde, por la abundancia de clorofila en sus celdillas. A la envol- tura herbácea sigue el líber que á veces forma varias membranas como las hojas de un libro, á cuya semejanza debe su nombre. Fig. 16. — Tronco de roblo. 30 NOCIONES DE BOTÁNICA. Debajo del líber se encuentra una zona celular llamada cambiitm ó zona generatriz, que es la que se Irunslortnn auualmcnLe en una nueva capa do tejido leñoso en la superficie de la albura. Esla es la zona que desempeña el principal papel en el crecimiento de los vegetales. Entre la corteza y la medula se encuentra el cuerpo leñoso, que es la madera de que se sirve la industria, y cuyo aspecto, textura y color varía en cada lamida vegetal. El cuerpo leñoso se divido en dos zonas : una central de color oscuro, es la madera compítela y otra externa de color más claro llamada albura en contacto con ia zona generatriz. Así como una capa del cambium se transforma anualmente en otra de albura, la capa más interna do. albura se endurece para convertirse en madera compacta. La edad del vege- tal podría conocerse por el número de zonas concéntricas que. so cuenten en la madera y en la albura. En el corte tic un tronco su ven unas estrías que parten de la medula á distintas zonas, son los raijos medulares que antes de la formación de la madera esta- blecen una circulación complementaria entre los órganos medu- lares y los tejidos corticales y subcorlicales. La estructura del tallo de las plantas inonocoliledóncas no es igual á la de las dicotiledóneas. El corte transversal del tronco do una encina da un as- pecto diverso del que presenta el corlo en el estípite de una pal- mera [fig. 17). Un tajo transversal en una caña de maíz puede dar- idea de la estructura de estos tallos. Aquí la corteza envuelve solamente una masa de tejido ce- lular, en cuyo tejido se hallan diseminados formando una zona excéntrica, haces fibrosos que vie- nen á representar el tejido ¡enoso. Esta estructura so observa tam- bién en los acotiledónea; en los heléchos arborescentes el tallo llega á adquirir proporciones gigan- tescas. El tallo es una de las partes del vegetal que tiene numerosas aplicaciones en la industria. Los grandes árboles proveen de las diversas clases de maderas usadas en la construcción do muebles y objetos de lujo. La lablería para las construcciones de pavi- mentos, puertas, ventanas, etc., etc., se saca de la madera del pinabete, sauce, álamo, roble, sabino, fresno, etc., do los árboles Fi£. 17. — Sección transversal do un tallo do planta monocotilcdónea. 31 LAS HOJAS. que en cada región son más comunes en las serranías. Las ma- deras que provienen de los árboles forestales se dividen en ma- deras blancas ó blandas, duras ó de color oscuro y semiblandas. CAPÍTULO CUARTO Las hojas. 2 1. — Las hojas son expansiones membranosas que na- cen en los nudos vitales del tallo y do las ramas. La hoja tiene la misma constitución que el tallo. La hoja puede consi- derarse como un jirón del tallo comprendiendo en él la corteza, el tejido leñoso y la medula. En la cara inferior de la hoja se encuentran los vasos y las fibras liberianas, es la expan- ción de la corteza. Las nervaduras de la hoja y el tejido blando de la cara superior representan el cuerpo leñoso y el tejido medular. Las dos caras de la hoja están recuhierlas por una membrana epidérmica, distinguiéndose la de la cara superior por la presencia de estomas, pequeños orificios destinados á la respiración. 2.». — La hoja completa la forman tres partes princi- pales : la vaina, el pecíolo y el limbo. Comunmente se en- cuentran solo el pecíolo y el limbo, y en las hojas sentadas únicamente el limbo. 2 «. — La vaina es un pecíolo membranoso que envuelve el tallo en una porción variable, y las hojas que tienen este órgano se llaman envainantes. La vaina si está soldada for- mando un tubo se llama entera, como se ve en algunas plantas de la familia de las Ciperáceas. Si los bordes de la vaina están separados se llama hendida, como se vé en el maíz. En muchas plantas la vaina está representada por apéndices membranosos llamados estipulas. ’£7. — Las estípulas ( fig . 47) son escamas ú hojas pe- queñas que nacen en los puntos de inserción de las hojas completas y cuando se encuentran invariables en algunos puntos del tallo, sirven para distinguir algunas familias na- 32 NOCIONES DE BOTÁNICA, turales, como en las rosáceas. En las Gramíneas so encuen- tra en el punto de unión de la vaina con el limbo, una membrana vellosa llamada lígula y esta es una estípula transformada. ss. — El pecíolo es un eje fibroso que sirve de sostén á la hoja. Hay hojas que care- cen de él y se llaman senta- das. Las fibras del pecíolo se continúan en el limbo hacién- dose aparentes por la cara inferior de la hoja, y consti- tuyen las nervaduras ó arma- zón delahoja (fig. 18). Cuan- do el pecíolo se distribuye á un solo limbo, la hoja se llama simple, pero cuando el pe- cíolo forma un raquis ó eje pri- mario en donde se insertan hojas con sus pecíolos correspondientes, entonces se forma una ramita ó una hoja compuesta (fig. 19). Ai- punas veces el pecíolo se ensan- cha al grado de tomar el aspecto de una hoja y esta disposición del pecíolo se llama /¡lodo. 25». — El limbo es la parle plana, delgada, membranosa de la hoja. Según la distribución de las nervaduras en el limbo la hoja toma diversos nombres. Se llama penninervada, porque se asemeja á las barbas de una pluma, cuando las nervaduras secundarias parten del eje pinnario tomando una dis- posición paralela y perpendicular á la nervadura media. Se llama LAS HOJAS. 33 digitada ó pahninervada, como en las hojas de la vid, de a higuera, etc., cuando las nervaduras parten del extremo del peciolo y se dirigen hacia los lóbulos de la hoja. Se Huma pellada, como la hoja del mastuerzo, cuando el pecíolo cntia al limbo por su centro y las nervaduras se distribuyen en forma de rayos. .Sí». Atendiendo á la disposición de las hojas se dividen en : 1 Hojas alternas, las que están dispuestas alternativa- mente en la extensión del tallo como en el naranjo ( Citrus aurantium), F. Aurantáceas. 2 Hojas opuestas, las que nacen en puntos diametralmente opuestos como en la albahaca (Occimun basilicum ), F. La- l)iíidcis. 3 Hojas dispersas, cuando están como desordenadas en su inserción; ejemplo la gualda {Reseda luteola), F. Resédeas. 4 o Hojas amontonadas, las que están desordenadas y son tan numerosas que casi cubren el tallo como en el mirlo (Myrtus comunis), F. Mirtáceas. 5 o Hojas estrelladas ó ver lidiadas, cuando tres ó más lojas 10 can a tallo insertándose á la misma altura como en la rubia {Ruina tmctorum), F. Rubiáceas. 6 o Hojas fasciculadas, las que nacen de un solo punto forman- do manojos, como en el ocote (. Pinus communis), F. Coniferas. 7 ° Hojas recargadas 6 acipresadas, cuando están tan api- ñadas que casi se recubren unas á otras, como en el ciprés común ( Cupresus sempervivens ), F. Coniferas. 3 í . — Por la inserción del tallo las hojas se distinguen en : I o Hojas pecioladas, que son las que tienen pecíolo más ó menos largo {fig. 48), como en el Manto de la Virgen (Convólvulos ipomea), F. Convolvuláceas. 2 o Hojas abroqueladas (fig. 20) cuando el pezón se inserta casi al centio del limbo, como en el mastuerzo (7 ’ropceolum majus ), F. Geraniáceas. Fig. 20. — TI. abroquelada. 287 3 34 NOCIONES DE BOTÁNICA. 3 o Hojas sentadas cuando carecen de pecíolo, como en la jabonera ( Saponaria officinalis), F. Cariotíleas. 4 o Hoja amplcxicaule, la que abraza al tallo como la ver- bena ( Verbena bonar ¿ensis). F. Verbenáceas. También se llaman per foliadas ó atravesadas {fig. 21). Fig. 21. Fig. 22. II. perfoliada. II. trabada. 3° Hojas trabadas ó unidas , cuando dos hojas amplexi- caules crecen al rededor del tallo, como en el cardo ( Dipsa - cus fullonum), F. Dipsáceas {fig. 22). 6 o Hojas decurrentes, cuando el limbo se prolonga hacia abajo adhiriéndose al tallo; ejemplo, el lampote ( Uelicinlhus alatus ), F. Sinantéreas. 7 o Hojas envainantes, aquellas cuyo pecíolo envuelve al tallo como en el maíz. 33. — Por la figura de la hoja se distinguen con los si- guientes califica- tivos : T° H. Circular ú orbicular ( fig . 23) la que más se aproxima á la fi- gura circular, ej. sombrerillo [Hy- drocotilus vulga- ris), F. Umbelí- feras. 2 o II. redondea - Fig. 23. II. orbicular. Fig. 24. II. arredondeada, da, la intermediaria éntrela circular y la elíptica, ej. alamo blanco (. Populas alba), F. Amentáceas {fig- - ‘)- 3 o H. aovada, la que circunscribe la forma de un huevo, Las hojas, 3ü ej. mejorana ( Origanum maj orana), F. Labiadas (fia. 25). •V> II. /ras-aovada, la aovada que tiene su extremo superior m.is.mi 10 que el inferior, ej. verdolaga iPortulaca olerácea), í . Portuláceas (fig. 26). 5 II. elíptica, la que es más larga que ancha y tiene sus Mcntha Fig. 25. TI. aovada. extremos más angostos que el centro, ej. poleo pulegium ), F. Labiadas (fig. 27). (> H. espatuladn, la que es ancha en el vértice y se ve estrechando hasta la base, ej. mercadela (Caléndula offici ■ nahs), F. Sinanléreas (fig. 28). 7 o II. Cuneiforme, ó en forma de cuña, seme- jante á la tras-aovada, cuyo tipo es la siempre- viva (Sedum quítense , Run), F. Crasuláceas. 8 o H. oblonga, la que es mucho más larga que ancha, ej. alelí amarillo (C/ieiranlhus cheiri), F. Cruciferas (fig. 29). 9° II. lanceolada, la que es más larga que ancha é insensiblemente se estrecha hacía las extremidades ej j™ e rosa (Nenum okander), F. Apocíneas f fig. 30). . , . • hi que es muy larga y angosLaen toda su ex ten sion, ej. enaldo (Anet/mmgraveoleus), F. Umbelíferas (fig, 31) Fig. 30. II. lauücolnda. Fig. 31. 11. üucal. 36 NOCIONES DE BOTÁNICA. 11° H. alesnada , la que es semejante á la lineal, pero con la base un poco más ancha, ej. oyamel ( Pinus religiosa), F. Coniferas ifig. 33). capilar, la que es más larga y delgada h. capilar, h. alesnada, ride), F. Alripléxeas-Quenopódeas. lo 0 H. dellada , es la romboidea pero asemejándose más á la letra A delta del alfabeto griego, ej. quelite cimarrón [Atriplex laciniala ), F. Alripléxeas ( f'O ■ 34). 16° II. angulosa, la que tiene muchos ángulos sin darle una forma determinada al conjunto, ej. el lolvache ( Datura estramonium), F. Solanáceas. 17° H. arriñonada, la que es una orbicular aplastada y lleva una escotadura en su base, ej. geranio [Pelar goniunx reniforme ), F. Geraniáceas [fig. 33). 18" H. acorazonada , semejante á la aovada pero con la base hundida en una escotadura, ej. yedra ( Convolvulus ipomcea), F. Convolvuláceas [fig. 36). que la lineal, ej. hinojo [Anelhum fceniculi), F. Umbelíferas (fig. 32). 13° H. triangular , la que tiene tres ángulos como el eupatorio ( E úpalo - rium triangular ), F. Sinantóreas. 14° H. rombo, la que se asemeja á un rombo más ó menos regular, como el quelite de comer [C henopodium vi- Fig. 34. — II. deltada. LAS HOJAS. 37 19° H. sagitada ó aflechada ( fig . 37), es lina hoja triangu- lar que lleva una escotadura profunda en la base, ej. sagi- taria ( Sagitaria sagiti folia), F. Juncáceas. 20° H. alabardada, es la sagitada que lleva los ángulos de la base muy salientes y caracterizando tres lóbulos en la hoja, ej . acederilla ( Rumex acet orilla) . F. Poligóneas [fig. 38). 21° H. runcinada, la que tiene senos profundos, ángulos salientes, que parece ramosa, como en la amapola ( Papa- ver r, Uceas ), F. Papaveráceas (fig. 39). 22° H. lirada, la que ofrece senos profundos y escota- duras pequeñas en los lóbulos, ej. solano lanudo ( Solanum liratum ), F. Solanáceas (fig. 40). 38 NOCIONES DE BOTANICA- 23° H. tras-cordiforme, es la corazonada cuyo pecíolo se hallaría en el extremo (fig. 41). 24° H. auriculada, la que tiene en la liase dos apéndices corno oreiillas, ei. salvia (Salvia officinulis), 1* . Labia- das (fig. 42). 33. — Considerando la figura que presenta el borde de la hoja también ha recibido diversos nombres. Fig. 12. H. auriculada. Fig. 43. II. aserrada. Fig. 44. II. festonada. ej I. H. entera, la que ofrece su borde enteramente parejo, ■ membrillo (Piras cidonia), F. ltosáceas (fig. 24). II. H. aserrada , laque tiene dentaduras semejantes á una sierra, ej. lepidio (Lepi- dium latifolium), F. Cruciferas (fig. 43). La hoja finamente aserrada tiene los dien- tes muy finos como en la (fig. 18) hoja de tilo. III. II. crenada ó festonada, la que tiene dientes obtusos ó arredondeados, finos ó r gruesos, ej. violeta (Viola oclorala ), F. Violáceas (fig. 44). IV. H. ondulada , la que presenta dien- F ¡ 43 Ies arredondeados muy largos como ondas n. culebreada. (fifi- 20). V. II. culebreada, la que presenta dien- tes y lóbulos muy irregulares como en el tomate cimarrón (■ Solanum tedian), F. Solanáceas (fig. 45). 39 LAS HOJAS. VI. II. cartilaginosa, la que tiene sus llóreles duros como coriáceas, oj. maguey meco [Agave lultca ), F. Bromeleáceas. sí a . — Atendiendo á la superficie, la hoja puede ser : I u II. lisa, que es tersa en toda su superficie, como en el naranjo [Cilrus auraniium), F. Aurantáceas. 2 o H. lampiña , que carece de vello, ej. valeriana (1 até- rianarulva ), F. Valeri añaceas. ' 3 o II. lustrosa, la que brilla como si tuviera barniz, ej. limón ( Cilrus medica ), F. Aurantáceas. 4 o II. glutinosa ó pegajosa , la que tiene secreciones gluti- nosas, ej. tabaco cimarrón [Hgdrolea spinosa ), F. Campa- nuláceas. o° II. afelpada, la que tiene el aspecto de la felpa, ej. marrubio ( Marruhiuin vulgaris ), F. Labiadas. G° II. sedosa , la que tiene pelos suaves y lustrosos, ej. Sangre de Cristo ( Agrostema coronaria), F. Cariofíleas. 7° II. arrugada , la que parece se lia estrujado y luego extendido, ej. col ( Brassica olerácea ), F. Cruciferas. 8 o II. escarchada, la que ofrece vejiguillas transparentes como gotas de rocío, ej. rocío [Mcsembryanthemum papu- losum). Nota. — Hay todavía otras muchas clasificaciones en el estudio de las hojas que sería muy pesado el recargarlas en este capítulo, pues con lo expuesto es bastante ya para hacer un estudio casi correcto de las hojas. :ts. — El mejor método para estudiar las hojas consiste en formarse un foliarlo, disecando hojas de todas formas, pegándolas en un cuaderno y anotando el nombre de la planta de donde proviene, el nombre de la hoja llenando los dalos siguientes : Hoja de (aquí el nombre de la planta). Caracteres relativos (entera ó dentada, etc.), ipeciolada, sentada, estipulada), (reticnlada, pinada, etc.), (simple ó compuesta), al margen, á sus partes á su venación ó nervaduras, al número. 40 NOCIONES DE (seminal, la primera hoja que salo de la semilla, radical, caulinar, ó floral), (alternas, opuestas, verticiladas, dispersas), (peciolada, sentada, abroquela- da ó peltada, trabada, envai- nante, etc.), (entera, dentada, ondulada, etc.), (orbicular, redondeada, aova- i da, elíptica, espatulada, li- near, etc.). (desnuda, lisa, lampiña, lus- trosa, pegajosa, etc.), (apergaminada, carnosa, jugosa), (morada [quelite] manchada), (los que se encuentren). BOTÁNICA. al lugar donde nace. á la disposición en el tallo, á la inserción del pecíolo. ¡í la disposición del margen, á la forma. á la superficie. á la contestura. al color. caracteres particulares. El estudio minucioso de la hojas no es superfino pues se educa la atención para fijarse en muchos detalles que al principio pasaban desapercibidos. Esta educación es muv provechosa para los estudios de ciencias de observación como lo son las ciencias naturales. 35. — Obsérvase en algunas plantas que pueden llevar á la vez distintas cla- ses de hojas. Así por ejemplo, el eu- calipto ofrece hojas opuestas, sésiles y glaucas, en la in- fancia del árbol, y pecioladas, alternas y en forma de hoz en la edad adulta. En las plantas acuáticas es muy tienen^limbo 1 ; Us TcuáticaTsMo^vecias. a ^ reas frecuente este CUSO. „ . , . La sagitaria pre- senta hojas acuáticas asentadas, largas; y hojas aéreas en LAS HOJAS. 41 / forma de saeta de donde le viene su nombre. El ranúnculo acuático tiene hojas aéreas discoideas (orbiculares) ondu- ladas, lobuladas, en tanto que las acuáticas están reducidas á las nervaduras ó venas (fig. 46). Cuestionario. 24. ¿Cómo so define la hoja? — 25. ¿ En cuántas parles se divide la hoja? — 2G. ¿Qué es la vaina? — 27. ¿Qué son estípulas? — 2S. ¿Qué es el peciolo? — 29. ¿Qué particularidades ofrece el limbo? — 30. ¿ Cómo se llaman las hojas considerando su disposición en el tallo? — 31. ¿ Cómo se distinguen las hojas por su las hojas por su figura? — 33. figura del borde del limbo? — 34. ¿ Cómo se nombran las hojas según los diversos aspectos de su superficie? — 35. ¿Cuál es el mejor método para estudiar las hojas ? Ampliaciones al estudio de las hojas necesarias al profesor para que no deje hueco al- guno en sus explicaciones al alcance de los niños. Hasta aquí nos ocupamos solamente ríe la hoja simple, pero habiendo reseñado sus principales caracteres. Vamos ahora ¡i estudiar la hoja com- puesta. La reunión de varias hojas simples, llevadas en un eje común ó raquis forma una hoja compuesta. Si las hojas están dispuestas á lo largo del raquis, se llaman hojas pena- das (figs. 19 y 47); si están situadas en la extremidad de un pecíolo común, se llaman hojas digitadas. El raquis puede dar inserción á pecío- los secundarios que á su ve inserción ? — 32. ¿ Cómo se distinguen ¿Cómo se distinguen las hojas por la Fig. 47. — Tallo de chícharo ( Pisum sa- tivum ) con una hoja compuesta cuyos folíolos terminales están transformados en zarcillos. En la base lleva dos gran- des estípulas. llevan hojas penadas, como en la 42 NOCIONES DE BOTÁNICA.. sensitiva, y entonces se dicen bipenadas. Tripenadas se llaman las hojas recibidas en peciolos terciarios. Las hojas uo están dispuestas sin orden en el vegetal, pues antes bien, el nacimiento de las hojas, su disposición en el tallo y las ramas, esta sujeto a leyes cuyo estudio y determinación constituye una rama especial de la botánica llamada íilotaxia. Cada especie de plantas tiene la inserción do sus hojas siguiendo un plan regular, al cual se ha dado el nombre de ciclo. Este ciclo puede reducirse á fórmulas aritméticas. Este es un hecho muy curioso sobre el cual es preciso detener un momento la atención. Según la disposición de las hojas en el tallo pueden ser alternas, opuestas o verlicilndas. Las hojas alternas se hallan insertas de tal manera nue par- tiendo de alguna de ellas se tiene que recorrer el tallo, trazando una linea espiral para poder pasar sucesivamente sobre cada nudo o punto i c mseicióu de las hojas, resultando que al cabo de una ó más vueltas de espira se encuentra siempre una hoja colocada encima ó debajo do la rpie lia servido de punto de partida. Para reducir á cifras numéricas esta dispo- sición, se expresan en nume- radores el número de vueltas de espira, que vienen á in- dicar el ciclo entre dos hojas que se corresponden en la misma línea vertical, y el número de hojas conlenido en el ciclo dan la cifra do los denominadores. Si so toman las dos frac- . 1 1 Clones - y - y se suman sus 2 términos, tendremos y, si so suman las dos ultimas da- rán ~, v seguiendo así esta .112 3 S 8 sene «J manera de adición obtendremos la 13 34 i’ 8* 13 21 etc., que es precisamente el orden numérico á que eslán RAMIFICACIÓN. 43 sujetas las leyes filoláxicns según las diversas especies vegetales. Así, el aliso tiene un ciclo de el olmo -, el cerezo y el nielo- u w O cotón de jj. O Las hojas opuestas, son las que tienen un ciclo alterno, pero se insertan dos á dos á la misma altura y en sentido diamctralmente opuesto. Las hojas verticiladas, son las que forman alrededor del tullo, anillos formados por tres, cuatro, cinco ó más hojas. Las hojas alternas ó verticiladas están sujetas á las leyes del ciclo antes descrito. Hay muchas hojas que parecen compuestas debido á las pro fundas hendiduras que ofrece el limbo, designándose con los nombres de hendidas, escotadas, desgarradas, etc. La hoja de cáñamo {fig. 48) ofrece un ejemplo de estas incisiones profundas del limbo dividiéndose las venas en otros tantos lóbulos á que se distribuyen. CAPÍTULO QUINTO Ramificación. 3 <í. — Cuando se examina el punto de inserción de las hojas, bien existan éstas ó se hayan desprendido de las ramas, se encuentra un pequeño cuerpo de forma ovoidea» aplanado en algunas plantas, liso ó cubierto de escamas, que es el órgano que da nacimiento á nuevas ramas. Se llama yema. En este órgano se concentran las fuerzas vitales de la planta para darle vida en cada primavera. :g?. — Las yemas son simples cuando dan nacimiento á una sola rama y compuestas cuando producen dos ó más ramas. Como la yema contiene los rudimentos de una nueva planta se distinguen en yemas f alíferas ( fig . 49) las que al desarrollarse sólo producen ramas y hojas ; yemas floríferas las que dan nacimiento á llores, y yemas mixtas las que producen hojas y llores. as. — La yema folífera es más perfecta que el botón por- Fig. 49. — Yema desarrollada. 44 NOCIONES DE BOTÁNICA, que éste sólo contiene á la flor, en tanto que aquélla es una rama en embrión que desarrollará nuevas ramas que á su vez se car- garán de yemas diversas. 80. — Las yemas que se des- arrollan en la raíz ó en el tallo sub- terráneo, se llaman turiones, y es la parte comestible del espárrago [fig. SO). «o. — La cubierta escamosa pro- tectora del retoño microíito (planta en embrión) se llama penda y ge- neralmente está como barnizada por una sustancia gomo-resinosa, que se le llama blaslocola , es decir bar- niz protector del germen. 41 . — Se llama yema rápida la que aparece y sigue su crecimiento basta producir ramas ó flores, pero si se detiene en su des- arrollo el primer año para desarro- llarse en el siguiente se llama yema dormida. Los caracteres de estas cla- ses de yemas deben ser bien apre- ciados por los jardineros para injer- tar sus plantas y tomar yemas, no al acaso, sino con seguridad en quesean de una ú otra clase para forzar sus cultivos en un año ó esperar á que prendan en el primero y fructifiquen en el siguiente. Los jardineros han aprovechado la facilidad de hacer vivir las yemas en otros vegetales practicando una operación llamada in- jerto en escudo. Cuestionario. 36. ¿Qué es una yema? — 37. ¿Cuántas clases hay de yemas? — . • ¿ A 1 "-' se distingue una yema de un botón? — 39. ¿ Qué son tu- riones ? 40. ¿ Qué es la pérula? — 41. ¿Qué es yema rápida y yema dormida? Fig. 50. — Espárragos con turiones comestibles. FISIOLOGÍA VEGETAL. 45 CAPÍTULO SEXTO Fisiología vegetal. — Funciones de nutrición. La vida de la raíz 42. — Los órganos destinados á la nutrición y creci- miento del vegetal son la raíz, el tallo y las hojas. Conocida la estructura de estos órganos vamos ahora á estudiar sus funciones. 4a. — Sabemos ya que la raíz crece alargándose por su extremidad ya se considere el crecimiento en la raíz prin- cipal ó en las raicillas. Éstas llevan las espongiolas que están formadas por una aglomeración de celdillas blandas que hacen el papel de en- dpsmómetros 1 pues al través de las paredes de las celdillas pasan los líquidos y los gases que la raíz toma del suelo para hacerlos circular por los vasos del tallo. En el agua pasan disueltas algunas sales de potasa, sosa, cal y algunos com- puestos amoniacales. Entre los gases, el ácido carbónico que se halla disuello en el agua. 44. — La fuerza que determina la absorción de estas sustancias y su circulación por todos los tejidos de la planta es la resultante de la triple acción de la endósmosis, la ca- pilaridad y la evaporación por las hojas. 45. — Para hacer sensible el fenómeno de la endósmosis bastará practicar una muy sencilla experiencia de física. Se toma una bombilla cilindrica de algún aparato de gas y se tapa una de las extremidades por medio de una piel de guante, una membrana de vejiga ó una tela de cebolla, fijándola en el contorno del tubo por medio de un hilo; luego se llena hasta la mitad, de una solución de goma ó de ■1. El profesor debe recordar á los alumnos todo lo relativo á la endós- mosis que hayan aprendido en sus lecciones de cosas. 40 NOCIONES DE BOTÁNICA. aguo azucarada y se sumerge esla parte del tubo en un vaso de agua. La diferencia de densidad de los líquidos deter- minan una doble corriente, porque el agua pura y la solu- ción del tubo pasan al través de la membrana, pero do- minan la corriente del liquido menos denso ; lo cual se comprueba si se tiene cuidado do señalar el nivel del líquido contenido en el tubo, por medio de una rayita marcada por fuera. Cuando se ha verificado la endósinosis, se ve que el contenido del tubo ha aumentado, lo cual prueba que ha entrado agua; además, el agua del vaso contiene algo de azúcar ó de goma que ha pasado del tubo al vaso. Apli- quemos estos datos á la acción endosmólica de la raíz. Los líquidos contenidos en las células y vasos de la raíz son más densos que el agua contenida en los terrenos donde se desarrollan estas parles del vegetal, y por endósinosis pasa al través de los tabiques celulares de las espongiolas ó de los pelos radicales. -í«. — Pero hay otra fuerza que combinada con la en- dósmosis, provócala circulación ascendente de los líquidos que han pasado á la raíz, es Ja fuerza de la capilaridad, fenó- meno físico en virtud del cual los líquidos ascienden con fa- cilidad en los tubos de muy pequeño calibre, cuyas condi- ciones satisface perfectamente la histología de la raíz. Esta fuerza de la capilaridad tiene por objeto en los fenómenos vitales de la planta, contrarrestar la influencia de la gra. .. - iu. y vi aoucxiau e la savia, por el vacío que se produce en la superficie de vedad y favorecer el as- censo de los líquidos que la absorción introduce sin cesar en el interior de la raíz. Fig. 51. — Experiencia que demuestra la exhalación de las hojas. -1?. — Cuando el ve- getal llega al período de desarrollo en que necesita una circulación enérgica, se cubre de hojas, porque éstas además de sor los aparatos de su respira- ción, favorecen el ascenso 47 FISIOLOGÍA. VEGETAL, las hojas, vacío que es debido á la evaporación que tiene lugar en la superficie de estas expansiones del tejido vegetal. El agua se evapora en la superficie de las hojas y el vacío que deja en sus vasos es llevado rápidamente por la savia y jugos que circulan por el tallo y las ramas. •as. • — • Para demostrar la exhalación de vapor de agua en la superficie de las hojas, se sumerge el pecíolo de una hoja en una rama do un tubo en U (fig. 51), lleno de agua y poniendo en el otro extremo del tubo otro más delgado que sirve para marcar el nivel del agua en a, y después de unos momentos el agua baja de nivel hacia b lo cual prueba que ha pasado por el pecíolo á reemplazar en la hoja la que se ha evaporado. I Funciones be las iiojas 40. — Las hojas desempeñan tres funciones principales : la transpiración, la exhalación y la respiración . La transpiración se verifica en la superficie de las hojas á través de los estomas particularmente, siendo por esto mismo más abundante la transpiración en la cara inferior porque en ella abundan los estomas. La transpiración de las hojas es siempre más activa cuando el aire está más seco y la temperatura es más alta. 50 . — La respiración de las plantas consiste en el cam- bio de gases, de los que ella contiene y los que hay en el aire ambiente. Bajo este aspecto se consideran dos clases de respiración, una llamada general y otra designada con el calificativo de clorofílica. 5 a . — La respiración general consiste en la absorción del oxígeno del aire y la combustión de su carbono propio en lodos los tejidos de la planta favorecida por la presencia del oxígeno para formar ácido carbónico. >»2. — La respiración clorofílica es inversa de la general, pues ésta consiste en la absorción del ácido carbónico de la atmósfera y de una exhalación proporcional de oxígeno. Esta función sólo tiene lugar en el día, bajo la influencia de la luz, y sólo por los órganos verdes que tienen en sus tejidos abundante materia clorofílica. 48 NOCIONES DE BOTÁNICA. 33. — Este fenómeno se puede demostrar experimental - mente del modo más sencillo. Basta cubrir una planta en toda su lozanía, una albahaca por ejemplo, con una cam- pana de cristal (/ig. 52), y exponer esta planta á la luz solar directa. Unos momentos después de la ex- posición se desprende el gas que se acumula en la parte superior de esta campana. Analizando en seguida este gas se comprueba que es oxígeno, y para ello basta poner en contacto con él un cerillo apa- gado, pero conservando la cabeza algún punto incandescente, pues Fig. 52. - Campana p ara demos- 1U8g ° C ? n „ VÍVa 1UZ ‘ U " lr0Z ° ho^as'" 1 0xhalacl0n gaseosa de i as (le Y esc a se inflama y se consume en un momento, operando como con el cerillo. 51 ~ La respiración clorofílica se verifica á la luz difusa pero con menos intensidad que en la luz solar. Pero en la oscuridad, durante el sueño de las plantas sucede lo con- trallo, la función clorofílica es inversa, pues la planta absorbe el oxigeno del aire y exhala ácido carbónico. a unción clorofílica es una función de nutrición puesto que bajo la influencia de la luz la clorofila reduce ó descompone el acudo carbónico del aire y toma el carbono necesario para la formación de sus tejidos y deja libre el oxi eno El carbono es tan necesario á las plantas como ] a leche a los animales en su primera infancia senL7ÍT nd ° UI Í y?£ etal cslá expuesto á la oscuridad llanvid-i^ 1 ^ Se a P ai 'eciéndole una enfermedad hombre ^ '"Tí?’, es com ° I a cloro-anemia del , v P °, ■? ^ e )I( ° a * a fie carbono que nutre los tejidos y contribuye á formar nuevos. |,ropens¡,i ', 1 * los enln oscuridad S olante o ™ n i ] “,'P S " “Y Ju blancas, de ff d “lc2 Jn ' T ” nci . c _ e > como sucede con el apio, ] a n i • , , , , nuLiiu sucecie con e aobicona, la lechuga, la barba de capuchino, etc. FISIOLOGÍA VEGETAL. •10 Circulación de la savia — La savia es el ligua cargada de sales que las raíces absorben del suelo y envían al tallo en donde se hace más compleja su composición, pues á su paso por los tejidos vegetales se carga de gomas, azúcar, albúmina, etc., y cons- tituye bajo esta torma la sangre vegetal ó savia, que es un Huido nutritivo. S5>. — El ascenso de la savia desde la raíz basta las liojas, flores y frutos es lo que caracteriza la circulación de la savia, pero además de esta circulación ascendente hay otra en sentido inverso y se llama savia descendente á la que vuelve de las hojas al tallo. - La savia ascendente pasa por las capas leñosas en los vegetales jóvenes y es más activa en la primavera pues está destinada á proveer de alimento á las yemas que tienen que dar nuevas ramas al vegetal. Para que la savia desempeñe estas funciones de nutrición necesita llegar á las hojas, en donde, como ya sabemos, se verifica la respiración clorofílica que la carga de carbono, el alimento vegetal por excelencia, y así vuelve por la corteza atravesando por las capas del líber y las de la zona generatriz. Para apreciar el fenómeno de la savia descendente bastará poner una ligadura en una rama ó en el tronco de una planta joven y al cabo de unos ocho días se verá que la corteza forma un hincha- miento arriba de la ligadura, lo cual prueba el acumulo de líquido estorbado en su paso al descender de las hojas á la raíz. 01 • — Las fuerzas que determinan el ascenso de la savia son, como ya hemos visto, la endósmosis, la capilaridad, la evaporación ó transpiración, á las que hay que agregar la fuerza vital de los tejidos vivos, cuya fuerza es la direc- triz en todoslos fenómenos de la vida orgánica. Esta fuerza vital la comprueba la giración que es la que determina los movimientos de los líquidos intracelulares. — Además de la savia, existe en los vegetales el látex que circula por su sistema especial de vasos llamados laclicíferos y á la circulación de este fluido se le designa con 50 NOCIONES DE BOTÁNICA, el nombre de ciclosis. El látex es un líquido que contiene en suspensión muchos productos de secreción vegetal, que son verdaderos residuos de. nutrición ó materias propias que elabora el vegetal, como gomas, resinas, cera, cauchó, aceites, etc. Crecimiento de los vegetales 63 . — Los vegetales se desarrollan por las yemas laterales del tallo y sobre todo por la terminal, aumentando así la longitud del tallo y el número de las ramas. Además, la savia descendente favorece el desarrollo de una nueva capa en la zona generatriz en donde una de las ya formadas se cambia en albura y otra interior de albura se endurece en cuerpo leñoso. De este modo el tallo y ramas crecen en diá- metro ó espesor. Como anualmente sé verifica esto, en el tronco de un árbol dicotiledón se puede saber aproximada- mente el número de años de vida por el número de capas que forman el cuerpo leñoso ( fuj . 16). gj. — En los monocotiledones y acotiledones arbores- centes el crecimiento en altura es el mismo, pero el creci- miento en espesor se verifica sólo por el aumento anual de haces fibrosos que se agregan á los del año anterior recha- zándolos hacia la corteza cuya dureza va aumentando por este motivo. Nutrición de los vegetales 6.». — La nutrición es el fenómeno fisiológico en virtud del cual el ser vivo, vegetal ó animal, asimila en su orga- nismo temporalmente las sustancias que ha introducido del exterior y que después de transformadas, las toma para sí, hasta que volviendo á gastarse las eliminan bajo distintas formas, cuya eliminación constituye la desasimilaciún. También pueden eleborar á expensas de la savia algunas sustancias que luego excretan por diversos órganos pero indudablemente después de haber prestado algún servicio á la nutrición de la planta. «6. — La nutrición exige el concurso de muchas fun- FISIOLOGÍA VEGETAL. ol cienes vegetales : la absorción de la savia bruta por las raíces, la circulación do la savia y sus diversas transforma- ciones en lo íntimo de los tejidos; la respiración de las hojas y ni descomposición del ácido carbónico por la cloró- ida, la circulación descendente de la savia cargada de car- bono, la formación del látex, la asimilación ó crecimiento del vegetal, su floración y fructificación y su desasimilación por las diversas exhalaciones y secreciones, tal es el ciclo de la nutrición. ~ -* jOS principales productos de secreción vegetal e aflorados por tejidos celulares destinados á este fin, son e azúcar de cuyo principio se cargan en abundancia muchas p tintas como la remolacha en la raíz y la caña de azúcar en el tallo. , f ecu ^ a vegetal abunda en muchas plantas en diversos Oiganos, habiendo algunos que parece estar destinados á este solo objeto, como la patata. Las gomas, los aceites, las resinas, el cauchó, las ma- ca us có manles, son otros tantos productos de secreción que la industria aprovecha, favoreciendo por esto el cultivo de las plantas que dan esos productos. Cuestionario. í . 2 ,; ¿ral ' l ! e * POn , lns órganos que favorecen la nutrición del vegetal? . , , <; Que función desempeña la raíz ?— 44. ¿Qué causas motivan la vea | C í. Un d ,°„ a savia? — 4'->. ¿Cómo se hace sensible la endósmosis eguiai . — ,g. ¿Qué papel desempeña la capitalidad? — 47. ¿ Por qué se cubre de bojas el vegetal? - 48. ¿Cómo se demuestra la exhalación ® ^Setales 9 — 49. ¿Cuáles son las funciones de las hojas? — cs ' a respiración? — si. ¿Qué es respiración general? — h"? es respiración clorofílica ?- 53. ¿Cómo se demuestra la respi- "" clorofílica ? — 54. ¿Cómo se verifica la respiración clorifílica? — aiiihmiüü.f 3 ÍÍL ’ es la clorofílica? — £56. ¿Qué se entiende por — ¿Que provecho sacan los jardineros del ahilamiento ? 9 «- i Que es la savia? - 59. ¿ Q „ é es circulación de la savia? - cs f via ascendente? -61. ¿Qué fuerzas determinan el ascenso veJíiil r .Tf- i „ Ql,e cnsa es el 'atex? - 63. ¿Cómo crecen los dnneq ■? 3 '? ternes . 64. ¿Cómo crecen los vegetales monocotile- funciññ 6 °;í Que r0Sa es Ia nutric¡ ón de las plantas? — 66. ¿ Qué • i uc ones vegetales concurren á favorecer la nutrición? _ 67. ¿Cuáles son lo» principales productos de secreción vegetal? NOCIONES DE BOTÁNICA. CAPÍTULO SÉPTIMO Inflorescencia. — Se da el nombre de inflorescencia ú la manera do estar distribuidas ó arregladas las lloTes en las ramas déla planta. Asi como las hojas tienen una disposición numérica para cada especie de plantas, también las llores obedecen á una disposición especial que permite someter á una clasificación natural las inilorescencius. Para caracterizar la inflorescencia es preciso re- cordar algunos órganos que se deben tener muy bien cono- cidos para este caso. Estos órganos son : El pedúnculo es un tallito sin hojas que sostiene la flor ó las flores, según que estén solas ó dispuestas en racimo. El raquis es un pedúnculo común á muchas flores sentadas. El pedicelo es un pedúnculo secundario que se inserta en un pedúnculo común llevando en el extremo una florecita. Se llaman b ni deas á las hojas transformadas que nacen del pedúnculo y protegen alas flores antes de su expansión acompañándolas después si no son caedizas. Cuando mu- chas bracteas forman un verticilo debajo de la flor se llama '¿neo lucro. Por último se llama receptáculo un pedúnculo aplastado en lorma de disco, que lleva muchas flores sentadas. f odas las formas de inflorescencia atendiendo á su tugar en la planta se reducen á dos categorías, que son • indefinidas y definidas. Esta última parece limitar la floral cion del vegetal en tanto que la otra no la limita. Las inflorescencias indefinidas se reducen á tres tipos principales que son : la espiga , el racimo y el panículo ó INFLORESCENCIA. 53 panoja. K esta serie podría añadirse las inflorescencias compuestas ó mixtas. ~ Primer tipo : Espiga y sus variedades. La espiga es una inflorescencia caracterizada por un eje ó raquis que lleva flores sentadas. La espiga es simple cuando las flores están sentadas en el raquis directamente como se ve en la cebada ( Hordcum vufgarc) F. Gramíneas. La espiga es compuesta cuando en el raquis se insertan otras espiguitns dísticas llamadas espiguillas , como se ve en el maíz, el trigo (fig. 33). .4 101 También se llama es- piga ladeada aquellaque lleva las flores insertas por un solo lado del ra- quis, como en la digital ó dedalera amarilla ( í)i- gilalis laica ) F. Escro- l'ulariáceas. Espiga dística es la que lleva las flores in- sertas en dos lados opuestos del raquis, co- mo en la lengua de buey (.1 nrhusa officinnUs) F. Borragíneas. 3 55. — El ámenlo es una espiga que lleva flo- res articuladas en el ra- quis y es caedizo, como se observa en el sauce [Salix pentandra ) F. Amentáceas. Esta in- florescencia caracteriza una familia, la de las Amentáceas ií ir J- oi). «tí. — El espádice es una variedad de la espiga que tiene flores unisexuales y desnudas, sentadas en un raquis común, pero con la particularidad de estar protegidas por una Fijr. 5S. — Inflo- rescenoia en es- pida compuesta fie trigo. Rama florida bedul. (J4 NOCIONES DE BOTANICA. enorme bráctea llamada espala ; ejemplo el alcatraz {Arum sagitifolium) F. Aroideas. ■ 3 -a. — El cono ó estróbilo, es una variedad del ámenlo, en el cual el raquis lleva llores de uno ú otro sexo, prote- gidas por brácteas escamosas, como en el cono de las coni- feras, ó por brácteas membranosas como en el lúpulo. ?5. — El capitulo ó calatide, es una inilorescencia es- pecial que ofrecen las Sinanlé- reas, las Dipsáceas y las Com- puestas. Es una espiga aplas- tada que forma un platillo lla- mado clinanto (lecho de llores) en el cual se insertan muchas llores sésiles como se ve en la margarita (fig. 55). Las llores del centro A ( fig . 56), se lla- man / lósenlos y son regulares ; las del exterior se llaman semi- flósculos B y ofrecen una len- güeta que es la que forma la estrella de la flor; esta lengüeta se llama lígula. El tlipnntodio es una inilorescencia en capítulo cuyo receptáculo desgarrado en los bordes se hundo en el centro como en la dorstenia. El sicono esotra inilorescen- cia variedad del capítulo que tiene el platillo volteado al gra- do de encerrar las llores, como en el higo, que tiene la forma de una redomila. í®. — Segundo tipo. Raci- mo y sus variedades. El racimo es una inilorescencia en la cual no hay raquis, porque el pe- dúnculo ó eje primario se divide en pedicelos ó ejes secun- darios y éslos á su vez en ramillos terciarios y así sucesi- vamente hasta terminar en una ilor como se ve en la vid (Vilis vinifera) F. Ampelídeas. Fig* ^5. Capítulo de margarita, entero y cortado á lo largo ; es un capitulo radiado. Fig. 5G. — Flores aisladas de un capítulo de margarita. INFLORESCENCIA. ti 5 El racimo simple ( fuj . 57) lleva las flores pedunculadas sobre un eje común. El racimo compuesto es el que ofrece muchas subdivi- siones el eje primario como en la vid, la hierba mora ( Sola - num nigrum) F. Soláneas. w ■ — La panoja ó panículo, es una variedad del racimo que olrece llores pedunculadas subdivididas de diversos modos, cuyo tipo puede ser la avena que es un racimo formado de es- piguilllas (fig. 58). ®s. — El tirso es una variedad del ra- cimo, en el cual, las flores, llevadas en un eje común, se abren Fig. 5S. — Plañía de avena con inflorescencia en racime» compuesto do espiga. las que se hallan hacia la parle media, tomando el ramo el aspecto de un ovoide; ejemplos, la lila, la verónica oficinal (Ai/- S9). S!». — El corbnbo simple que es una variedad del ra- cimo, tiene de característico que todas las flores pedun- culadas se elevan á la misma altura, por lo que los pedún- culos de las flores más bajas son más largas como se ve en el peral, el saúco. S<». — La umbela simple o sérlula es un perfeccionen Fig. 57. — Inflorescencia de la azucena mos- trando las flores dispuestas en racimo y las brácleas que las acompaña. S6 NOCIONES DE BOTÁNICA. miento del capítulo pues las flores son pedunculadas y todas nacen del vértice dei eje primario asemejándose á los rayos de una rueda, como en el sombrerillo de agua ( Hidrocotile vulgaris ) F. Umbelíferas. Ésta inflorescencia como la del amento, ha caracterizado una fa- milia, las umbelíferas. si. — Tercer tipo. Varieda- des del Panículo. Esta inflores- cencia tiene dos variedades prin- cipales. El corimbo compuesto que defiere del simple en que los pe- dicelos se ramifican pero siempre se elevan á la misma altura, como en el saúco ( Sambucas nigra) F. Caprifoliáceas. La umbela compuesta es la misma simple pues sólo la ca- racteriza el agrupa miento de va- rias umbelas, que en esta inflo- rescencia se llaman umbelillas, como se ve en el hinojo, en la zanahoria (fig. 00) ( Daucus carotta) F. Umbelíferas. 83. — Algunas inflores- cencias especiales se refieren al racimo como la de la pal- mera que es un espádice com- p u esto llam ado rég i man , cu y as ramificaciones pedicilares lle- van flores unisexuales en es- pigas. s;í La guirnalda 6 co- rona es una variedad de la umbela compuesta, pudiendo servir de tipo la influí escencia de mil en rama {Achilen millefoliuin) F. Sinanléreas. Fig. 59. — Verónica oficinal. Inflorescencia en tirso. Fig. 60 . — Zanahoria, rama florida con las flores dispuestas en umbela compuesta. INFLORESCENCIA» 557 S-J. — Las inflorescencias definidas llevan el nombre de cymas y sus caracteres comunes son los siguientes. Cuando el tallo ó rama terminan en un pedúnculo que lleva su flor, es una inflorescencia definida en cyma simple. Pero si de la axila de las hojas nacen ramas que llevan en su extremo una flor, la cyma es compuesta. La cima simple da por terminada la ve- getación como en el narciso dolos prados. La cima escor- pioide es una cima en racimo simple pero cuyo eje prima- rio se arrolla como la cola de un alacrán. Ejemplo de csLa inflo- rescencia es el myo- sotis [fig. (51). Atendiendo al lugar en donde na- cen las flores, las in- florescencias pueden Fig. 01. — Myosolis. sor: Radicales cuando están cerca de la raíz. Ejemplo, la ce- rraja [Sondáis oleráceas) F. Sinantércas. Axilares, cuando el pedúnculo nace en la axila de las hojas como en los chinos [Impasiens balsamina) F. Gera- niáccas. Terminal, como en el clavel, que pertenece á las cymas. Solitaria , cuando la rama lleva una sola flor. Ejemplo, mal de ojos ( zinia uniflora). Cuestionario fiS. ¿Qué os la inflorescencia ? — (10. ¿Qué órganos presentan detalles particulares en la inflorescencia? — 70. ¡. Cúnni so olasifirnti las Inflores- cencias — 71. Qué es la espiga ? — 72. ¿Qué es el ámenlo? — 7H. ¿A el espádice? — 74. i V el cono? — 711. el capítulo ? — 7(1. ¿Qué es el racimo? — 77. ¿Y la panoja? — 78. ¿ Y el tirso ? — 79. ¿Y el coriui lio ? — 89. ¿Y la 58 NOCIONES DE BOTÁNICA. umbela? — 81. ¿Cuáles son las variedades del panículo? — 82. ¿Qué es el régimen ? — 83. ¿ Qué es la guirnalda ó corona? — 84. ¿ Qué son ov- inas? — 83. ¿Qué son inflorescencias radicales, axilares, terminales y solitarias ? CAPÍTULO OCTAVO La flor. 8«. — La flor es el órgano vegelal destinado á favorecer la multiplicación délas especies. La verdadera flor no es la que generalmente se considera corno tal, pues lo que llama la atención por la pureza de los colores son las cubiertas florales ó los órganos accesorios protectores de la verdadera flor. Estas envolturas protectoras son dos en la flor completa, pero puede existir sólo una y aun fallar una y otra. Cuando existen las dos, se llaman cáliz la más exterior y corola l a que le sigue. También se designa con el nombre de primer verticilo floral al cáliz y segundo verticilo floral á la corola. — El cáliz forma el primer verticilo en la flor com- pleta. Es la cubierta exterior de color verde cuando existe Ja corola, ó tomando los colores de la corola cuando falta ésta, y se llama cáliz pelciloídeo, como en el lirio, el col- chico. as hojas que forman el cáliz se llaman sópalos. Si el cu iz está formado por piezas separadas, como en el gira- so , se ama polisépalo; si está formado de una sola pieza, l') 1 ^ rimavera ’ se ^ ama gamosépalo ó monosópalo Ll número de sépalos es variable. La amapola tiene dos caedizos í/ig. 63 luego que se abre el bolón; la (icaria tiene tres sépalos, cuatro el alelí, etc. . ^ L 'Áli z es legular cuando están sus piezas dispuestas con simetría y es jrren-nl.n- i i ■ . „ . , J tí o UJai cuando no guardan orden m si- metría. ° El cáliz es caedizo como en la amapola, ó permanente LA FLOR. 59 como en la granada que acompaña al fruto en su madurez. También puede ser libre, como en la yedra ó adhcrente, cuando está pe- gado al ovario, como en el manto de San José (ÜEnothera longi folia). El cáliz puede afectar muchas for- mas, y sólo indicaremos algunas : cilindrico, tubuloso, campanulado, glo- boso (en el to- mate), angulo- so, etc. SS. — La co- rola forma el segundo verti- cilo floral y está formado de va- rias piezas sepa- radas ó soldadas formando una sola, presentan- do los colores mas variados y ricos, que re- crean la vista en los jardines. cáliz . 62. — Flor de primavera. — A, flor entera; B, flor hendida dejando ver los órganos reproductores. Las piezas que componen la corola se llaman pélalos, y Fig. G3. — Amapola. — 1, flor y botón. 2, flor cortada longitudinalmente. 3, fruto, á, grano cortado para ver el embrión. afectan formas, muy caprichosas. El pélalo consta de dos 00 NOCIONES DE BOTÁNICA. parles, la lámina y la uña, que es el punió do inserción y representa el pecíolo de la hoja. Cuando la corola está formada de piezas aisladas, sollama polipétala ( fig . 63), y si están soldadas, formando una sola, se dice gctmop ótala ó monopótala {fig . 62, A). La corola puede ser regular, si están dispuestos en orden regular, é, irrigular, si no guardan orden alguno. La corola polipétala irregular más notable es la que lia servido para caracterizar una tribu, la de las papilonáceas. La corola papilonácna ó amariposada consta de cinco pé- talos, que llevan distinto nombre: uno extendido es el estan- darte { fig . Gí, B'e), dos pegados en forma de guilla B'c, y dos laterales ó alas B'«. Esta corola se en- cuentra en el chícharo (Pisum ¡¡alivian) (fin 64, A). La corola gamopé- tala es regular ; puedo ser campanulada , co- mo en la campánula, infundibulilbrmo, co- mo en la maravilla; solacea, como en la borraja ; estrellada, como en el cuaja-le- che, etc. La corola gamopé- lala irregular puede dos lóbulos en el limbo, como en la salvia; lleva el nombro áe personada ó enmascarada en los perritos, etc • ~ 7 S 01 - rm0H * la fecundación están representados por el estambre v ,,i ,, 1 ls . . , „ •' 1 P' sul o, y I orinan el tercero y cuarto n ( > ríanlo en Ja flor comnlei-i vi „ s i ■ , I , , , . I m ld - El anaroceo es el enmonto de los estambres y el gmeceo ps el n!«i¡in n i , y . ® .n,:,, i , i , . ei pistilo floral. Androceo quiere (leen J ci cabti del Vcirón v círrríin i UJ1 j significa la casa de la mujer. Fig. Gí. — Chícharo cultiva rln \ n.íoen ; B, flor corlada verliraimenfe’- B' P CO rok desgajarla para mostrar sus piezas- a il-is a LA FLOR. 01 El estambre consta de tres partes : el filamento , que puede faltar; la antera, que es una especie de caja que encierra el polen. El poten es la materia fecundante que se desprende de las anteras en la época de la fecundación y se adhiere al estiyma del pistilo. Algunas anteras se sueldan, formando un tubo cilindrico, y esta disposición ha caracterizado una familia vegetal, la familia de las sinantéreas. Cuando el filamento no existe la antera se pega á algún otro órgano, como en el tubo de la corola. En una flor de floripondio se pueden examinar perfecta- mente estos órg: nos llórales, pues el filamento es muy largo y bien desarrollado, llevando una antera también muy grande. El polen se presenta bajo la forma de granos esféricos comunmente, de color amarillo, que colocados en una su- perficie húmeda se hinchan y revientan, dejando salir un líquido mucilaginoso llamado favila. Los filamentos del estambre pueden soldarse, formando un solo liaz y se llaman monadelfos, como en la malva, ó bien forman dos haces separados y se llaman diadelfos, como en la polígala, y también pueden distribuirse en tres hace- cillos como en algunos mirlos. El número de estambres es muy variable y ha servido al gran naturalista Linneo para establecer su clasificación vegetal. SD8». — El sistema de Linneo comprende 24 clases, de las cuales las trece primeras se fundan eu el número de los estambres. I a clase : : Monandria, un estambre, el coyol, la valeriana roja. Oa » Diandria, dos « jazmín, saúco, romero. 3 a » 'Mandria, tres » lirio, trigo, cebada. 4 a )) Tetraudria, cuatro » rubia, escabiosa. 5 a ») Pmilandria, cinco » belladona, borraja. 6* » ltexandria, seis » espárrago, azucena. 7 a » Ueplandria, siete „ Castalio de ludias. 8 a » Oclandria , ocho „ zarcillo. 9a )) Enneandria, nueve » laurel. 1 (Ja- )) Decandria, diez » ruda. lla » Dodecandria, de 11 á 20 « reseda 12 a » tcosandria , más de 20 insertos en el cáliz, fresa. 13» » Poliandria, de 20 la á 100 inserios en el receptáculo como en amapola. 62 NOCIONES DE BOTÁNICA. Hasta aquí las clases fundadas en el número de los estambres. Clases fundadas en el tamaño délos estambres : 14“ clase. Didinamia, — L a llores tienen cuatro estam- bres, dos chicos y dos más grandes ; alhucema. En general, todas las flores amariposadas y labiadas son didínamas. 1 o 1 clase. Telradinamia. — Flores de corola polipétala, con dos estambres chicos y cuatro grandes. Á esía clase pertenecen todas las llores cíe la familia de las cruciferas. Clases fundadas en la soldadura de los estambres : •16“ clase. Monadelfia. — Estambres en número variable, soldados por sus filamentos en un solo haz como en la malva. I 7“ clase. Diadelfia. — Estambres soldados por los lila- menlos formando dos hacecillos, como en la acacia. 1 8“ clase. Poliadelfia. — Estambres soldados en tres ó más hacecillos, como en el naranjo. Chase fundada en la soldadura de las anteras. \ 9“ clase. Singenesia. — Cinco estambres fundidos por las anteras, ejemplo, la lobelia. 1 Estambres soldados con el pistilo. 20“ clase. G mandria. — Los estambres forman un solo cuerpo con e pistilo, como en la arisloloquia. C ases fundadas en el sexo de las llores. -1“ clase. iMoncecia. - Flores de sexos distintos, pero Z T 6n Una misma Pínula, el maíz. ’ P ° una^oh'nlí !! WCla ' ~ Fl0I ' es de un sol ° sexo Nevadas por las pSmefa" ^ maSCulÍD0 y ° lras como en seSdanírff^""”- FJ ores hermafrodilas, dores uni- sexuadas, llevadas por una misma planta, como en el fresno. CrIPTOGAM.' AS 24 a clase. Criptogamia. — Flores como en los heléchos muscos 1,17° poco a P l ' ireníe s, Á ’ Sffos ’ hongos y liqúenes. el número dp loe muchos órdenes fundados en « ia f »™" ** ««■. Esta clasificación está abandonada hoy. LA FLOR. G3 ®fl. — El carpelo ó pistilo {fig. 6 4 D, fig. 6o B, C, D.) es el gineco ó cuarto verticilo do la flor, es el que se transfor- mará en fruto, llevando en su interior las semillas. 92. — El pistilo se compone de tres partes : el estigma, el estilo y el ovario. 03 . — El estigma es un cuerpo glandular, de forma varia- ble, que está en el extremo del estilo y está destinado á fijar el polen por medio de una sustancia glutinosa, que siempre lo humedece. 9-1. — El estilo es un filamento más ó menos largo (fig. 64 B) y hueco, por cuyo canal pasa la favila hasta llegar álos óvulos contenidos en el ovario. Cuando falta el estilo, los estigmas están sentados en el ovario, como se ve en la ama- pola, formando un disco radiado. » 5 . — El ovario es la parle inferior, abultada del pistilo, en cuya cavi- dad liavunoómásóvulos. Cuando el ovario procede de un solo carpelo, tiene una sola cavidad y es sim- ple, pudiendo llevar va- rios óvulos, como la haba, el frijol, etc. Cuando se reúnen dos, tres, cuatro ó más carpelos, forman un ovario compuesto, con tantas cavidades cuantos carpelos lo forman ; el colcbico (fig. 64 D) tiene un ovario trilocular, es decir, con tres cavidades. Pero si los tabiques interiores desaparecen, puede quedar una sola cavidad conteniendo los óvulos correspondientes á cada ovario, ejemplo la amapola. SíG, — L os óvulos son unos cuerpos pequeños, semejantes 61 NOCIONES DE BOTÁNICA, ala cbaquira que existen en el interior de los ovarios, son los rudimentos de la semilla Los óvulos están sujetos al ovario por unas libras más ó menos aparentes, que se llaman tra- fospermos, y según que estos troi'ospermos adhieran á la pared del ovario ó á un eje central, se dice que hay placenta- ción parietal ó axilar de los óvulos. » — Antes de proseguir el estudio de las funciones de la flor, consideremos algunas disposiciones especiales de los órganos que ya hemos estudiado. Atendiendo al punto de inserción de los estambres, se ■ dividen en tres clases naturales, que son los /tipoy ineos, cuando están insertos debajo del ovario ó del pistilo, como en el geranio ; los perigineos, cuando están insertos en el cáliz sobre la base del ovario, como en el granado, y los epiginéos, cuando están insertos sobre el mismo ovario como en la cicuta. Estos caracteres déla inserción de los estambres, así como la forma déla corola, forman el alma de la clasificación na- tural de L. de Jussieu, que vamos á explicar. s»§. — Jussieu dividió el reino vegetal en tres tipos fun- damentales basados en la estructura del embrión. l u Acotiledones ó criptógamos, que carecen de embrión; 2 U Monocotiledoncs, que tienen un solo cotiledón, como el maíz; 3 Ü Di cotiledones, que tienen dos cotiledones, como el mamey. Estos tres tipos se dividen en lo clases : Los acotiledones forman una sola clase, 1. Acotiledónea. Los monocotiledones forman tres clases, según que los estambres son hipogineos, perigineos ó epigineos. 2. Monohipoginia ; 3. Monoperiginia ; 4. Monoepiginia. Losdicoliledones se dividen primero en tres grupos, según que las plantas carecen de corola ó es monopélala ó poli- pétala. Cada uno de estos grupos se divide luego en clases atendiendo al modo de inserción de los estambres. Los dicotiledones apétalos (, apelalia ) pueden presentar los estambres epiginos, periginos ó hipoginos y formar respec- tivamente las clases : 5. Epistaminia ; 6. Peristaminia • 7. Hipostaminia. LA FLOR. 6a Los dicotiledones monopélnlos [Monopetalia) pueden tener la corola liipogina ó perigina, la corola epigina (. Epicorolia ) puede ser llor cuyos estambres tienen las anteras reunidas ó libres, y formar respectivamente las clases : S. Hipocorolia ; 9. Pericorolia ( epicorolia subdividida) ; 10. Sinanleria; 11. Corisanteria. Los dicoliledones polipétalos ( Polipelalia ) pueden tener estambres epiginos, liipoginos ó periginos y r formar respec- tivamente las clases : 12. Epipelalia; 13. llipopetaüa y 14. Pcripelalia. La lo 11 clase la forman las plantas unisexuales ó diclinas, llamada diclinia. El siguiente cuadro permite abarcar de una sola ojeada la manera de estar distribuidas estas clases conforme á los caracteres que liemos señalado. Esta clasificación es demasiado sencilla y bastará meditarla un cuarto de hora, para que no se olvide nunca, si se lian comprendido bien los fundamentos de esta clasificación. Cuadro de la clasificación de A. L. de Jussieu TIPOS. I. A COTILEDONES. II. Monocotiledon NES ^ I - III. Dicoti- LEUONES Monopélnlos | .Monopetalia ( Polipétalos | Polipelalia s liipoginos \. Acotiledónea. 2. Monohipo (jinia periginos epiginos ubres epiginos íi. Epislaminia. periginos (i. Perislaminia. hipoginos ~i. llipostaminia. oróla hipogina 8. Hipocorolia. — perigina 9. Pericorolia. — epigina epicorolia anteras reunidas. 10. Smanieria. anteras libres . . . 11. Corisanteria. ambres epiginos 12. Epipelalia. — hipogluos. — . 13. Uipopetatia. — periginos 14. Pcripelalia. — Se da el nombre de nectarios á unos cuerpos glan- dulosos situados en diversos puntos de la flor, pero su posi- ción es siempre constante en la misma especie de plantas. 287 5 06 NOCIONES DE BOTÁNICA. En las aquilegias ó palomitas en consulta (fie/. 66) se encuen- tran en los espolones de la corola, en otras flores están sobre el ovario ó en el cáliz. Sirven para secretar un líquido que atrae á los insectos, especialmente á las abe- jas, y á algunas aves, como el chu- pamirto. Cuestionario. 86. ¿ Qué es la flor y cómo está formada? — Si. Qué es el cáliz? — SS. ¿ Qué es la corola? — Si). ¿Qué es el estambre? — 90. ¿Cuál es la clasificación de Linneo? — 91. ¿Qué es el pistilo? — 92. ¿ Qué órganos forman el pistilo? — 93. ¿Qué es el estigma? — 94. ¿Qué es el estilo? — 93. ¿ Qué es el ovario? — 96. ¿Qué son los óvulos? — 97. ¿ Cuál es la clasificación de Jussieu y en qué se funda? — 9S. ¿ Qué son nectarios? Fig. GO. — Palomas en consulta. CAPÍTULO NOVENO Fruto. 5>2>. — -Cuando el polen escapa de las anteras, cae sobre el estigma siempre húmedo para favorecer la ruplura del grano de polen y que dé salida á la fovila. Esta materia atraviesa el canal del estilo y llega á los óvulos. Los óvulos están for- mados por dos menbranas superpuestas, la exterior llamada extina y la interior intina , conteniendo en su cavidad ia nuececilla y las vesículas embrionales. Estas membranas tienen un orificio que se corresponde en ambas y se llama micrópila. El tubo polínico ó fovila penetra por la micrúpila y allí desaparece en el interior del óvulo. Desde ese momento, el ovario comienza á crecer y los óvulos á transformarse en semillas. En las semillas, en un frijol, por ejemplo, tenemos las dos membranas del óvulo, la extina se llama ahora epis- perma ó testa y la inlina se llama endosperma ó te'gmen ; las FIÍUTO. G7 vesículas seminales y la nuececilla se lian transformado en el embrión. iumí. El embriones el rudimento de un nuevo ser, conte- nido en la semilla y que, puesta ésta en condiciones favorables de germinación, dará naci- miento á un vegetal [fia. 67). En el frijol, se ve encerrado por las dos membranas ya indicadas, dos cuerpos que en- cierran una plántula en mi- niatura; son los dos cotile- dones que protegen la radí- cula, el talludo y la gemida [fg. 68). La primera da naci- miento á las raíces, el segundo al tallo y la tercera á las pri- meras hojas. b o g . — El fruto es el ova- rio desarrollado y maduro, que lleva en su interior los millas. Fig. 67. — Embriones. — i. Embrión monocotiledóneo ( semilla de aceña). ft, albumen 6 perisperma; c. g, ?*, embrión; c. cotiledón; (j. gémula y talludo; r, raicilla. — 2. Embrión dicotiledóneo de la alubia en via de germinación, re, cotiledones; g , ge- mida; t y talluelo; r, raicilla. óvulos transformados en se- b< 63 . - — La diseminación es la distribución ó siembra na- tural de las semillas por la dehiscencia de los frutos, la caída de éstos al suelo y el transporte de la semillas de un sitio á otro por los vientos, las aguas ó las aves que las comen y no las digieren, expeliéndolas en condiciones de poder germinar, si caen en terreno favorable. Ási como la naturaleza facilita la disemi- nación, también facilita la fecundación por varios procedimientos naturales. Siendo con- dición indispensable que el polen caiga sobre el estigma, en las flores hermafroditas, que tienen el estilo más grande que los estam- bres, las flores están siempre colgando, como se ve en la palmera, para que el polen caiga directamente sobre el es- tigma. Las plantas que llevan el gineceo y el androceo sepa- rados, siempre ocupa éste la parle superior, como en el Fig. GS. — Gfi- milla, radícula y cotiledones. 08 NOCIONES DE BOTÁNICA, maíz, la higuerilla, ele. Guando son llevados en pies distin- tos, entonces las abejas y oíros insectos transportan el polen del androceo de una planta al gineceo de las llores de otra planta. i®:s. — Se llama dehiscencia ala diseminación de las se- millas por la ruptura de las hojas carpelares que las dejan en libertad y caen al suelo si son pesadas ó las lleva el vienLo á largas distancias si son ligeras. Algunos frutos, al abrirse, parece que tienen un resorte en sus valvas, que arrojan á gran distancia las semillas. Hay frutos dehiscentes que dejan escapar sus semillas luego que ya están maduros y secos, pero hay otros frutos que son indehiscentes, que se caen del árbol ó hierba sin dejar escapar las semillas, que no obstante germinan al destruirse naturalmente las cubiertas que las contenían. En algunos frutos indehiscentes, la cubierta protectora guarda las semillas, como sucede en la cápsula del chile ; en otros es blanda esa cubierta como la baya del gilomate, y en otros es blanda una parte y dura otra, como la drupa del durazno. Las bayas y las drupas son indehiscentes. Los frutos que dejan escapar los granos, han recibido diversos nombres, según la manera que tienen de abrirse; el folie alo se abre por una sola hendidura, como en el eléboro; la vaina por dos, como en el frijol; el pixidio se abre por una tapa á modo de jabonera, como en el beleño. ísm. — lil ti'uto es el ovario desarrollado y maduro, pero cuando el cáliz es gam osépalo, algunas veces adhiere al fruto y lo acompaña en su desarrollo. El fruto se compone de dos partes : el pericarpio y ]a semilla. El paricarpo está formado por las paredes del ovario y esta formado,, como la hoja carpelar, que se ha transformado para constituir la cavidad del ovario, de tres partes bien dis- tintas, que son : el epicarpo, el inesocarpo y el endoca.rpjo. El epicarpo es la membrana exterior que envuelve al fruto- el inesocarpo es la membrana vascular que está debajo ,] f q epicarpo y que, en algunos frutos, es de naturaleza carnosa, como el melón, el ahuacate, y se llama sarcocarpo; el en l docarpo es la membrana que está en contacto con la se- FRUTO. 69 milla y, en algunos frutos, como el durazno, constituye el hueso. hl pericarpo puede ser simple ó compuesto y llevar una ó muchas semillas que adhieren á las paredes del pericarpo ó al eje central, formado por la reunión de varias hojas car- pelares, que dan lugar al desarrollo de un fruto compuesto. En una vaina de chícharo, se distinguen muy bien los granos ó semillas pendientes de los trofospennos, que son unas hebrilas fijas á una de las costillas de la hoja. La semilla es el órgano que contiene el embrión destinado á la reproducción de otro vegetal. Se compone del cpispermo y la nuececilla. El cpispermo se divide en dos membranas, (pie pueden distinguirse poniendo á remojar una almendra, la exterior se llama tcxta y la interior legmcn. La nuececilla se compone del perispermo y el embrión. El perispermo es una masa de materiales nutritivos para el embrión y cuya naturaleza es variable, pues en el trigo, el maíz, etc., es feculenta, en la nuez de coco oleaginosa, córnea en el café, etc. En algunas semillas puede fallar y estar solo el embrión, como en la lenteja. Cuestionario. 99. ¿ Qué es la fecundación del vegetal ? — 100. ¿ Qué es el embrión? — 101. ¿Qué cosa es el fruto? — 102. ¿Qué es la diseminación? — ■loa. ¿ Qué es la dehiscencia ? - — 104. ¿Cuáles son las partes que consli- tuyeu el fruto? EXPLICACIONES COMPLEMENTARIAS RELATIVAS AL FROTO El fruto, una vez que lia madurado en la planta, se desprende de la rama que lo sostenía y cao al suelo eu donde se conserva nvás ó menos tiempo según la especie á que pertenezca. Cuando son pesados caen al pie del árbol, si son ligeros, pueden caer más lejos arrastrados por el viento. Esto es lo que se llama disemina- ción ó siembra natural. La diseminación se funda en determinadas propiedades de los frutos, en relación con su naturaleza misma, su duración en buen estado, las condiciones del suelo en que tienen que diseminar las especies vegetales sus semillas, etc. 70 NOCIONES DE BOTÁNICA. Esta propiedad se llama dehiscencia, pero no es común á todos los frutos, pues unos son dehiscentes y otros no. Lardehisccucia es la diseminación de los granos, cuando éstos están maduros, por procedimientos naturales. En general puede decirse (|ue los frutos carnosos, rpie tienen nu sarcocarpo desarrollado, son indehiscentes. Los frutos secos son indehiscentes unos y otros no. Esta circunstancia exige una clasificación precisa. La dehiscencia puede verificarse de muchas maneras, poro en general debe considerarse como valvar teniendo en cuenta que las hojas carpelares que forman el ovario se separan para dejar escapar la semilla. Cada hoja separada se llama valva. Sírvanos de ejemplo el frijol y el fruto del heleno. La hoja carpelar del frijol tiene dos bordes que se llaman, sutura ventral ¡i los bordos de la hoja carpelar que se han soldado para formar la vaina, es el borde mas delgado y la nervadura dorsal, ancha, correspondo á la nerva- dura media de la hoja; ambos bordes so rompen y se separan las dos valvas que se enrollan y dejan escapar los granos. Cuando el fruto está formado por varias hojas carpelares consti- tuyendo un ovario plurilocular ó de muchas cavidades, la dehiscen- cia se hace de varios modos y cada uno de estos tiene su nombre especial. "11110 1 La dehiscencia septicida , que quiere decir por separación do ns tabiques, que forman las cavidades del ovario. E11 esta de- hiscencia los tabiques se separan quedando aislada cada hoja car- pelar, y entonces cada carpelo se abre por su sutura ventral de- jando. escapar os granos. Esta dehiscencia es propia del ricino la digital, el cólchico, etc. ’ 2 ° La dehiscencia loculicida, como su nombre lo índica (locas cavidad, scuidere, dividir), se verifica por la separación de las ca- vidades carpe ares del fruto llevando cada valva en su cara inte,™ -!¿ que s ° ,dado 0 adherido, lo cual da por resultado que cada l l s r 1 * * 4 S f a , )la pt T ' a P arte media quedando cerrada por los , ' s a u n 113 de dehiscencia es común á las liliáceas, como la azucena, el tulipán. .como ó Dehiscencia septi.fraga. El nombre de esta dehiscencia indin c rompimiento de los tabiques y consisle en la separación de bis venas, r ejando los tabiques en el centro formando una especie de columna, como en el estramonio, toloache, etc. . 4 Dehiscencia pi.vidaria. Esta es una forma especial do ln valvar, siendo en este caso una valva superior que se abre sol) “ una cavidad inferior, en la cual están alojados los granos : es co „ a apaceia ic una polvera esférica que estuviese sujeta por un FRUTO. 71 solo punto. Esta dehiscencia es propia del beleño, del anagálide y de los amarantos. 5 o Dehiscencia poricida. El fruto es una cápsula que se abre por dos poros tapados por una válvula, sea en el vértice ó en la base. El ¡ruto de las flores llamadas vulgarmente perritos presentan el tipo de esta dehiscencia. 0 o Dehiscencia denticida. Esta dehiscencia es aquella en que las valvas al separarse quedan formando como dientes en la extre- midad superior del fruto. EE FRUTO CLASIFICACIÓN nE LOS FIIUTOS Si el fruto es el ovario fecundado, desarrollado y maduro, y este ovario puede estar formado de una hoja carpelar simple, múltiple soldada ó agrupada á otras, la clasilicacióu de los frutos se funda muy naturalmente en la disposición del ovario. También puede lomarse en consideración la forma de una in- florescencia y en este sentido, M. Cauvet, divide los frutos en dos grandes categorías, que son : I a , los que provienen de una sola llor; y 2 a , los que provienen de varias flores agrupadas en una in- llorcsccncia. Las divisiones y subdivisiones en el estudio de la clasificación do los frutos, son muy complicadas, por lo cual es indispensable adoptar el estilo clásico escolar, para su descripción, pues por experiencia cu nuestra clase de botánica, estamos convencidos que es el úuico medio que da resultado. PRIMERA CATEGORÍA V Frutos que provienen de una flor. Los frutos de esta categoría pueden estar formados de un solo carpelo ó de muchos carpelos aislados ó reunidos, pero sin fusio- narse, y forman una clase, la de los frutos apocarpos, que quiere decir de carpelos separados. Se les llama sincarpos, es decir, unidos, fusionados, á la se- gunda clase de esta categoría, que la forman ios carpelos soldados, que provienen sea de un ovario unilocular con tabiques incom- pletos ó reabsorbidos, ó de ovario plurilocular. NOCIONES DE BOTÁNICA. SEGUNDA CATEGORÍA Frutos que provienen de muchas flores. Forma dos clases : la de los frutos compuestos, y la de los frutos sinantocarr'os ó sea frutos unidos. Langlebert divide estas cuatro clases de la manera siguiente ; l 11 Frutos simples ó apocarpos; 2“ Frutos múltiples ó ppl ¡carpos ; 3 a Frutos soldados ó sincarpos; 4 a Frutos compuestos ó sinanlocarpos. I a Clase. — Frutos simples ó apocarpos. Fslos frutos son ordinariamente solitarios en el receptáculo v provienen de un solo carpelo, ó bien de un ovario unilocular que lleva un solo trofospermo. Por su constitución característica se divide en dos «runos : fru- tos secos y frutos carnosos. A. — Frutos apocarpos secos. Este fruto se subdivideen dos categorías, que son cuando constan de una sola semilla y son indebisccntes, y cuando tienen varias semillas y son dehiscentes. frutos, apocarpos secos, monospermos é indebisccntes. y la sámara” 011 " 1 COmpremle ü ' es cs P ccies : tíl aquenio, el cariopse 1 Aquenio . — - Es un fruto seco que contiene una sola semilla Tnon^ o e i SU ‘ S ° C adu al Paricarpo, como se ve en los cardos, la ané- mona, el gmasol, en las poligóneas y en las compuestas. . ~ Pomología original, que quiere decir cabeza de intimamente ni” fl ’ U .-° SCC ° ln,lelliscen[ e ! cuyo grano está soldado . a . pm'icnrpo, como puede verse en el fruto de las grammeas, sirviendo de tipos el trigo y el maíz. . uma> a. — Es un aquenio que tiene, en la superficie del np. i i carpo unas alas membranosas, cuya disposición ofrece el fruto 1 1 o mo, e resno y el arce, que pueden servir de. tipos. ] ainbien consideran algunos botánicos otra especie que no es sino un agrupa mi en lo de aquenios, y se le llama Jolinquenio, p u ! diendo servir de tipo el fruto de las umbelíferas 73 FRUTO. Frutos apocnrpos secos, polispermos y dehiscentes. Esta categoría comprende dos especies : el folí- culo y la legumbre ó vaina. Folículo. — Es un fruto generalmente mem- branoso, de una sola cavidad, conteniendo muchas semillas adheridas á un trofospermo sutural y cuya dehiscencia se verifica por la sutura ventral. Tipos : el laurel rosa, el elé- boro, el acónito. 2 a Legumbre ó vaina. — Es un fruto membranoso, formado por una cavidad, bivalvo, con- teniendo varias semillas adhe- ridas á un solo trofospermo sutural. La dehiscencia se hace por las dos suturas, ventral y dorsal, presentando después de hecha, dos valvas. Es el fruto de las leguminosas, cuyo tipo puede ser t'l frijol [fig. 69). _ Cauvet señala en esta categoría otra especie, el pixiclio simple, que es un frulo de un solo carpelo, de dehiscencia pixularia como se observa en algunos amarantos [fig. 70). Fifr. G9. — Vaina del chícharo. Fig. 70. Pixidio del beleño. B. — Frutos apocarpos carnosos. Este grupo contiene solamente dos especies : la drupa y la nuez, d a Drupa. — Fruto cuyo endocarpo está caracterizado por un núcleo huesoso que con- tiene la semilla, y el mesocarpo muy des- arrollado y carnoso que le ha valido el nombre de sarcocarpo, como se ve en los tipos de esta especie, que son la ciruela, cereza, durazno [fiü- "!)• . , , 2“ Núes. — Esta es una variedad de la drupa, cuyo mesocarpo es coriáceo, como puede verse en el frulo del cocotero, del almen- dro y del nogal. Á este grupo refiere Cauvet otra especie, la Baya simple que es un fruto suculento, de sar- cocarpo desarrollado y sin hueso, cuyo tipo es el Arum, el Ber- berís. 2 a Clase. — Frutos múltiples ó policarpos. Fig. 71. Corle do una cereza. Fig. <2. — Fruto múltiplo del fram- bueso. '4 NOCIONES DE BOTÁNICA. Los frutos múltiples provienen de la reunión de muchos car- pelos en una sola ílor (fig. 72). Las especies que caracterizan los frutos múlti- ples, so redoren á los de los npocarpos simples según su forma, así la frambuesa os una reunión de pequeñas drupas sostenidas en un receptáculo común; la fresa es un conjunto de aqueuios; la magnolia está formada de drupas; la nfgela, es- pecie de ranúnculo, está formado de polículos. 3 a Clase. — Frutos soldados ó sincarpos. Estos frutos provienen de la reunión de dos ó más carpelos soldados, dando lugar á la formación de una sola ó de varias cavidades en el pericarpo y puede presentarse en dos cavidades, secos ó carnosos. Los frutos sincarpos secos, son dehiscentes ó indehiscentes. á. — Frutos sincarpos secos indehiscentes. Este grupo presenta dos especies, la glande y la carcomía. i 1 Glande. — Llamado también bellota, es un fruto que por aborto de los tabiques y de los óvulos queda reducida á una sola cavidad y una sola semilla. La base de este fruto presenta un ¡n_ volucro escamoso llamado cúpula, la cual puede extenderse v en volver todo el fruto, como en el castaño. El tipo de la glande es la bellota, la avellana, la castaña. 2 a Carcomía. — Este fruto presenta muchos tabiques membra- nosos, llenos de granos, y aunque no os dehiscente, se puede re- ventar y dejar ver los agrupamientos de las semillas debido á la plenitud del crecimiento que vence la resistencia del pericarpo Tipo : la granada. Cauvel, señala en esta serie la samaridia, que es un fruto com- puesto de muchas sámaras soldadas por su base, como se ve en el arce. 13. Frutos sincarpos secos dehiscentes. Este grupo comprende cuatro especies : la cápsula, la silicua vera, la silicua falsa y el pixidio. I a Cápsula. — Fruto seco, unilocular, formado por la fusión de carpelos, cuyos tabiques persisten en parte ó desaparecen, p 0 - Jisperma y que presenta las tres formas de dehiscencia según las especies. También se bacn la dehiscencia poricida como sucede en ¡a amapola. Tipo de este fruto : el tabaco, el tulipán (fig. 73). FRUTO. 7o 2 a Silicua. — Algunos naturalistas distinguen dos formas, la verdadera y la falsa. a. — Silicua verdadera. Fruto caracterizado por un tabique persistente formado por los trofospermos y por los estigmas, siempre superpuestos al tabique. Tiene dos cavidades con muchas semillas, la col. Tipo C. — Silicua falsa. Es la ciipsula do ara- dlas papaveráceas, que se distingue de la ante- rior por los estigmas al- ternos y no superpuestos al tabique. Tipo : el glau- ciunr. 3 a Silicula. — Es el fruto de muchas crucife- ras que se. abre por dos valvas de abajo hacia arri- ba y es muy largo, como se ve en la monicardia [fin. 74). 4 a PixicUo. — Es un fruto uniloculnr ó de muchas cavidades, ordinariamente de forma globulosa y conteniendo muchas semillas. La dehiscencia característica de este fruto es una especie de tapa que se levanta en la parle superior. Tipos : la verdolaga, el be- leño ( ftg ■ 70). Fig. 73. Cápsula de adormidera. Fip. 74. — Sili- cua del clavo. Frutos sincarpos carnosos. Estos frutos son suculentos debido á la cantidad de jugos que contienen por el desarrollo de alguna de las capas del pericarpo, y comprenden seis clases : la baila compuesta, el hosperidio, la balausta, la pepónide, la melónide ó manzana y el nuculanio ó drupa compuesta. •I a Baya compuesta. — Este fruto uni ó plurilncular, formado por un ovario supero y algunas veces infero, contiene varios gra- nos envueltos por una masa pulposa, como puedo examinarse con el tipo de esta clase que es la uva. 2 a Ilcsperidio. — Fruto de opiearpo delgado dividido en su in- terior por muchos tabiques, cada uno de los cuales está ocupado por una sección del fruto en forma de gajo con su membrana co- rrespondiente. Este gajo está lleno de vesículas jugosas entre las 76 NOCIONES DE BOTÁNICA, cuales se encuentran las semillas. Los t ubiques estila formados por el enduenrpo ; el mesocarpo se encuentra adherido al pericarpo que ordinariamente tiene células llenas de un aceite esencial propio a esta especie. Tipos : la naranja, ¡a lima, el limón. ’ >a f Us ^ ( i' ' Algunos naturalistas consideran en esta sección y con este nombre á las frutos cuyo tipo es la granada y que nos- tenor, lormado de un ovario infero, de mesocarpo coriáceo y cn- fo° granos! 16 * Cavidild un labi( I U0S donde están contenidos 4“ Pepónide. — Fruto ordinariamente muy grande con un sar- cocarpo pulposo algo grueso, y formando la pared de una gran cavidad libre ó llena de trofospermos muy desarrolla- dos que llevan un buen nú- mero de semillas. La cavidad es llena por el sarcocarpo ju- goso en la sandia, es libre en el melón y la calabaza que pueden lomarse como tipos S* Mclonide ó manzana — PYmn ^ ^ Cl , aSe ^ 9 ‘ 7S ^ soldados con el cáliz oresenfonU foi ' mac!o du llnicll0s carpelos desde paredes ebeDtai, do comunmente cinco cavida- gmosas conteniendo una semilla completa ó Fig. 75. — Melón. Fig. 76. — Manzana cortada ú lo largo y do través; contiene las semillas. “cimoR 76) ' E " . — Los Heléchos son plantas generalmenteherbáceas, con tallo subterráneo, rastrero, vivaz; algunos heléchos tie- nen tallo cilindrico en estípite del porte de las palmeras. Las hojas son alternas, grandes, entrecortadas, cuando tiernas se enrollan formando cayado. En la cara inferior se encuen- tran unos saquitos ó esporangios [fiq. 79) que contienen los esporos ó corpúsculos reproductores. Las especies principales son el helécho macho ó polipodio común, el osmonda real (Osmunda regalis), el culantrillo (Adianluin capillos), la escolopendra ó lengua de ciervo. La medicina utiliza el helécho macho en la curación de la solitaria. E H <3E>. — Las equisetáceas, tienen rizoma subterráneo, rastrero. Los tallos son cilindricos con surcos en la corteza, rígidos, simples o articulados, con una vaina membranosa en su punto de unión. Ramos dispuestos en verticilo cerca de las articulaciones, con la misma estructura del tallo, sólidos. Frutos terminales, con receptáculos verticilados en forma de conos, ó mazas. Esta familia es peque- ña en la actualidad, pues sólo la forma el género equiselum al cual perte- necen las colas de ca- ballo, quecuenta muchas especies. En los tiempos geoló- gicos, fueron más nu- merosos y más robustos los equisetos, pues és- tos, los heléchos arbo- rescentes y las coniferas han contribuido á la for- mación de la la hulla ó carbón de piedra. til. — Las Lirnpodiáceas forman una familia entre los heléchos y los musgos. Son plantas herbáceas ó subleñosas, Fifí. 80. — Licopodio en forma de maza [hj- copodiitm clavatum). — 1. Plañía en lora. — 2. Cápsula que contiene los esporangios, — 3. Esporangios de donde salen los esporos por una hendedura transversal. SS NOCIONES DE BOTÁNICA. vivaces; tallo ramoso, trepador; hojas numerosas y pe- queñas, tubuladas ó lanceoladas. Los órganos reproductores son de dos clases : I o en forma de cápsulas pequeñas, glo- bulosas, triangulares ó renilormes, uniloculares llenas de muchos esporos pequeños; 2 o cápsulas más grandes con tres esporos y que se abren por tres valvas. Estas cápsulas pue- den hallarse en el mismo individuo, solitarias unas veces ó formando espiga en otras [fig. 80). El licopodio que se usa como desecante son los esporos del Licopodium davalum. Las saleginelas son plantas her- báceas que viven en los bosques sombríos y húmedos; se cultivan como plantas de ornato en los jardines de invierno y en las estufas. ***• — L os Musgos son plantas generalmente verdes, provistas de tallo, con hojas verdes, numerosas, formando penachos en el vértice. Los esporos están contenidos en unas capsulas llamadas urnas sos- tenidas por un filamento delgado y largo. Las urnas están llenas de espo- ros y la dehiscencia se hace por medio de una tapadera [opérenlo) que se abre para dar salida á los esporos cuando están maduros. Los musgos son plantas que viven en todas parles, en el suelo, en los muros, en las piedras, etc. Entre los musgos, los esfagnos son los únicos importantes, porque se desarrollan en los pantanos y contribuyen á la formación de la turba tra.n s torra án dose len lam e n Le . En los climas muy fríos, los musgos cubren el tronco de los árboles para protegerlos formándoles un abrigo na- tural. El politrico común (fig. 81) so utiliza para hacer escobas, y con el esfagno palustre se hacen colchones. ri‘j. Las Algas son plantas acuáticas, provistas de F¡¡r. si. Politrico común. LAS PLANTAS ACOTILEDÓNEAS. 80 tillo y conteniendo clorofila. Las algas de agua dulce se les llama con /'creas y las de agua salada fucus. Hay algas que ílolan sobre el agua debido á unas vesículas aéreas que hacen el oficio de nadaderas. Los esporos de algunas algas tienen la facultad de moverse du- rante algún tiempo, y por esto se han considerado las algas co- mo el lazo de unión éntrelos ani- males y los vegetales. Entre las algas hay muchas especies útiles, algunas algas ma- rinas contienen yodo y se buscan para extraerles este principio mineiad. El fucus vesiculosas ( fig . 82) ha tenido mucho crédito para combatir la obesidad, pero su uso es peligroso. li-ll. — Los Hongos son plan- tas enteramente celulares, sin tallo ni raíces; su tejido es es- - ponjoso que adquiere variedad de formas según las especies. En un bongo completo se encuen- tra un pequeña estipa ó pedúnculo, carnoso y macizo ó bien fistuloso, fijos al suelo, á las maderas por unos filamentos que hacen el oficio de raicillas. Guando tierno, está envuelto el vegetal por una membrana en forma de bolsa llamada volca, que se rompe con el crecimiento pero quedando sus restos en el contorno del pedúnculo. Este órgano de sostén termina por una parle ensanchada independiente, llamada sombreen si está en forma de paragua, se llama cúpula si toma esta forma, y el de masa ó basto si se asemeja á estos objetos. lis. — Entre los bongos hay muchas especies útiles. Citaremos algunas. Eos hongos comestibles son numerosos, pero desgracia- damente no se pueden distinguir con toda certeza de los venenosos y el envenenamiento es mortal. Sin embargo las especies cultivadas expresamente de hongos comestibles no dan lugar á estos accidentes fatales. Fifr. S2. — Fucus vesiculoso. 00 NOCIONES DE BOTÁNICA. Entrelas especies que se cultivan en grande escala figuran en primera línea la trufa ( tuber cibctrium ) que es la delicia de los gastrónomos : abunda en los castañares y en las selvas de encinas, vegetando á seis ó nueve centímetros de profundidad en suelo. Los hongos comestibles (fig. 83) que pueden cultivarse son el Agárico del campo ( Agaricus campueslris), el A. delicioso (A. de- liciosas), el A. naranja (A. auran- tiaca), el Boleto comestible ( lioletus edulis ), la Clavaria de coral [Cía oa- ria coralloidcs), la Morilla (. Phallus esculnnlus), etc., pero hay especies venenosas que son muy parecidas á éstas. Fi -- s .?- - Agárico comestible Muchas enfermedades en las plañ- en diversos periodos de des- . , , . , . , . 1 arrollo. las son debutas a producciones de hongos en sus órganos. 1 l° s jardines se pueden cultivar dos especies : la Dfídalea olorosa (dedalea suaveoleus ) que cuando está tierno exhala un perfume á vainilla ó anís muy suave; el Agaricus gudtnpus, que forma los círculos de las hadas. Los hongos déla puniera vegetación mueren y forman un círculo con sus esporos que se desarrollan y mueren ensanchando el cuculo ce sus esporos. Lo curioso es que la generación que LAS PLAÑIAS ACOTILEDÓNEAS. 91 muere derrama en círculo sus esporos y en este punió nacen nuevos hongos rodeados de vegetación quedando el centro cada vez más árido por falla de abono natural. Eu un macizo de agárico geotropo se puede colocar en el centro una ma- ceta con alguna planta de follaje, ó bien un cactus que vive en terreno árido. Al inaugurarse un jardín se puede formar un macizo de genlropos y como cada año van ensanchando su círculo, se forman zonas concéntricas que pueden ir in- dicando los años que tiene de vida el jardín. a a 5 . — Como el objeto de la clasificación es poder distin- guir las especies vegetales unas de otras, para aprovechar las que son útiles y no confundirlas con las nocivas, de aquí la necesidad de ir dividiendo en grupos primero muy extensos, luego más reducidos de las plantas que van ofre- ciendo el mayor número de caracteres de semejanza. El nombre latino es indispensable conocerlo porque hay un gran número de plantas que no tienen nombre vulgar y sólo se pueden conocer por el científico muy especialmente al tra- tarse de las variedades. Seria imposible hacer un pedido con un surtido completo de plantas á un floricultor si no se le dan los nombres científicos. Así por ejemplo si se quiere una variedad de Aros cuyos nombres vulgares se ignoran se piden con su nombre científico asi : Antm ¿el/iiopicum; A. wlhiopicum álbum maculatiim ; .1. albi$patlnm;A. arisa- rwn : A • covnutvvij .4. covsicum .1. cvinilwn j /t. dvncuti - culum ; A. ilalicum; A. maculalum: A. orienlcilis; A. lev- mi folhini : A. tevnahuu. Hoy que por medio de la hibridez lian logrado producirlos floricultores muchas variedades de una sola especie, han in- troducido el sistema muy útil por cierto de distinguir con nombres propios esas variedades. Así por ejemplo el jacinto simple de color azul ha dado unas Ochenla variedades, de las cuales indicaremos las si- guientes : Argos, color azul con centro blanco; Camper, azul subido; Canning, azul hermoso; Carlos Dickens, azul porcelana matizado; S2 NOCION US BE BOTÁNICA. General Pélissier, azul claro ; La Noche, negro brillante; Leónidas, azul listado; Nimrod, azul pálido; Prieslley, azul porcelana; Regulus, azul lila; Ilobinsón, azul porcelana, centro cloro; Tío Tom, azul negro ; Von Humbolot, azul purpura, etc. lodos los nombres científicos constan do un nombro ge- nérico el cual comprende muchas plantas que tienen los mismos caracteres, y de un nombre especifico que es el que determina al individuo. Los demás nombres que siguen al especifico son característicos de las variedades. Así por ejemplo, las palomitas en consulta forman el ge- nero Aquilegia de la tribu de las Helcbórcas, familia do las ianuncuiáceas. El género aquilegia comprende : y^ 1 Q llegia l,ulrjari>i > manLo real, pajarillos, guantes de la La Aquilegia vulgar tiene tres variedades según que las flores sean blancas, azules ó rosadas. Aquilegia sibirica, Aguileña de Siberia que puede tener 1 n d.s vai íedades cuantos sean los colores de sus flores. Aquilegia canadensis , Aguileña del Canadá, etc. Hay g nuo 3 que tienen muchas especies, pues hemos citado uno muy reducido para que sólo dé idea del uso del nombre. La Campánula oirece las especies : pa(os”^ 5a,í, ^ a car P aí ^ ca ’ Campánula de los montes- Cár- Campamda urticnfolia, Campánula de llores de or- etc. La primera ofrece las variedades : Campanilla carpa! Inca alba, Campan ula cárpálica blanca ; i „ , maeranlha, Campánula carpática de flores grandes, etc. i a«. — La primera división del reino vegetal se funda en a presencia de un órgano en la gran mayoría de los vege- LAS PLANTAS ACOTILEDÓNEAS. 03 talos, de tal manera preciso que si vemos una planta que carece de semilla sabemos que pertenen á los acotiledones, y si la semilla tiene una almendra será monocotiledón y si dos dicolilcdón. Si vemos una planta cuyo fruto sea una cápsula de tres cavidades con varias semillas, lo que nos indica que el ova- rio tiene tres cavidades con muchos óvulos, el ovario infero con estilo terminado en tres plumones pelaloideos 3 estam- bres : cáliz pelaloideo con seis divisiones; tres internas er- guidas y tres externas encorvadas ; llores envueltas en espala membranosa; hojas alternas, aplanadas, envainantes; ri- zoma tuberoso y carnoso, decimos que esta planta pertenece á la familia de las Irídeasy queá esta familia pertenecerán lodos los ejemplares que ofrezcan esos caracteres. Asi pues un lirio tiene un aire de familia que lo refiere á todas las plantas que se le parezcan y luego tiene caracteres propios que van determinando el género y luego la especie. La familia comprende un grupo de individuos que tienen semejanza en la mayoría de sus órganos, diferenciándose por" algunos detalles, por ejemplo son iguales en raíz, tallo, hojas, fruto, se diferencian en la in florescencia, en el número de estambres, en la constitución de la flor, etc. Al ver un nopal, un rosal, una calabaza, un maíz, etc., se les distingue con toda precisión por su aire de familia, pero como no es esta la única división botánica, expondremos los caracteres de las divisiones usadas. s i *». — Clasificar un individua en botánica, es considerar en aquel ejemplar que se tiene á la vista, una amapola por ejemplo, todos los caracteres que le dan una organización propia, y cuyos caracteres lo diferencian no sólo de todos los vegetales que no se le parecen, sino también de los que se le asemejan, es decir de las demás amapolas. 120. — La reunión de individuos que se parezcan más entre síy cuyos caracteres los diferencien de otros individuos que tienen aire de familia, es lo que determina la especie, como un grupo de amapolas cuyos caracteres hacen diferen- ciar de ellas una adormidera que se les parece mucho. d « b . — Cuando algunos individuos de la misma especie ofrecen caracteres distintivos suficientes para formar un 94 NOCIONES DE BOTÁNICA. nuevo grupo, constituyen una variedad. La variedad es ar- tificial, dependiendo de procedimientos de cultivo, condiciones de clima, etc., de tal manera que sin el esfuerzo del hombre no se conserva dicha variedad y las especies vuelven á su tipo primitivo. D23. — La reunión de especies que tengan semejanza muy marcada, caracterizan el género, como las amapolas y las adormideras que están comprendidas en el género pa- paver. Si al nombre genérico se le agrega el especifico se tiene caracterizado al individuo; papaver r lúeas, quiere decir ya amapola; papaver somni ferian, quiere decir ador- mi aera, y papaver somni ferian álbum es una variedad de adormidera blanca. bs:í. _ La reunión de familias forma un orden, v la agrupación de órdenes forma las clases. Estas diferenciaciones naturales forman una verdadera escala descendente, en la cual siempre se tiene en cuenta cuando menos la especie, el género y la familia. Tipo. Clase. Orden. Familia. Tribu. Género. Especie. Variedad. Individuo. los deHl?. un Vegetal se procura llenar todos los detalles que lo caracterizan, como por ejemplo al ve? Z Ine7?f" r Sl " U - “ r ““*" >«'»' los nombres que tiene el individuo que tenemos á la vista si es la esno cíe común tenemos la llave del Vi • ,P e ~ legia vulgaris; el génL anuiW ^ ,i„ , . o LI1LI ° aquilegia pertenece a la familia le las a iimculaceas y esta familia tiene algunas tribus flgUra I a «quile-ia, es la tribu de las he/el ' \ USClimos en P" 1 clasificación de Jussieu la clase á quepeitenece encontraremos que es la hipopelalia que co- MULTIPLICACIÓN DE LOS VEGETALES. 93 rresponde al tipo de los dicotiledones ó dicotiledónea poli - petalia. 134 . — La hibridación es la multiplicación de las plan- tas entre familias afines, resultando algunas veces indivi- duos que no pueden propagar la especie por semilla. No obstante es un medio muy útil de multiplicación porque los híbridos son robustos. Cuestionario. 10o. ¿ Cómo pueden distinguirse las plantas dicotiledóneas viendo sola- mente su porte ? — 10C. ¿ Cómo se distinguen los monocotiledones ? — 107. ¿Cómo se distinguen los acotilcdones? — IOS. ¿Cuál es la división de las acotiledóneas? — 1 09 . ¿ Cuáles son los caracteres de los heléchos? — LIO. ¿Cuáles son los de las equisetáceas? — 111. ¿Cuáles son los de las licopodiáceas? — 112. ¿Cuáles son los de los musgos? — 113. ¿Cuáles son los de las algas? — 1 14. ¿Cuáles son los de los hongos? — 1 lí>. ¿Qué utilidad tienen los hongos?- — 116. ¿Qué especies de hongos se pueden cultivar de ornato? — 117. ¿Qué objeto tiene el conocimiento de la cla- sificación botánica? — US. ¿Qué es familia? — 119. ¿Qué es individuo? — 120. ¿Qué es especie? — 121. ¿Qué es una variedad? — 122. ¿ Qué es género ? — 123. ¿ Qué es orden ? — ¿ Qué es clase ? — 124. ¿ Qué es hibridación ? CAPÍTULO UNDÉCIMO Multiplicación de los vegetales. a 3.». — La multiplicación de las plantas puede hacerse por los medios que la misma naturaleza emplea para la con- servación de las especies, la semilla, ó bien se utilizan las yemas, los bulbos y aun las hojas para reproducir indivi- duos que conservan algunos caracteres distintos de los que tienen los de la misma especie reproducidos por semilla. aso. — Hay según esto dos clases de multiplicación : la natural y la artificial. La mayoría de las plantas agrícolas y hortícolas se multi- plican por semillas. Por medio de la semilla se obtienen in- 90 NOCIONES DE BOTÁNICA. dividuos que conservan todos los caracteres de la especie, poro no los de las variedades. Para conservar los caracteres de las variedades liav que recurrir á la multiplicación artificial, no habiendo también otro medio de propagación de aquellas especies que no dan semilla ó la que dan tiende á producir individuos degene- rados. Los árboles reproducidos artificialmente crecen más rápi- damente y adquieren un tamaño mayor que los multiplica- dos por semilla, en el mismo tiempo. La multiplicación artificial se hace por acodo, por estaca ó por injerto. ■ ‘¿i - — La siembra es el acto de confiar los granos ma- duros á la tierra preparada y en Ja época conveniente para obtener la reproducción de las especies. B 88. — Las siembras se hacen de asiento con las semillas de árboles forestales ó con aquellas plantas en las, cuales carece de objeto el trasplante. B88 bis. — Los árboles frutales se siembran en vivero ó pepinera con el objeto de vigilar más fácilmente su creci- miento y trasplantarlos de asiento cuando ha adquirido bastante vigor la planta, cuya época varía según las espe- cies. 5 — Las ventajas de la pepinera no sólo se fundan en la facilidad de vigilancia y comodidad de cultivo en los pri- meros años, sino en el desarrollo de los arboles que es más precoz y por consiguiente se obtienen frutos en más corto tiempo que es lo que importa al cultivador, no obstante que los arboles sembrados de asiento duran más años, pero sus frutos son también más tardíos. La viña, el grosellero, el frambueso son arbustos que per- tenecen al cultivo frutal y nunca se multiplican por semilla! j.l». Las siembras no se hacen al capricho, pues la misma naturaleza indícalas épocas en que deben sembrarse las semillas en relación con la estación en que fructifican las especies. Cuando el fruto ha madurado y se desprende del árbol la semilla está apta para germinar." Pero el horticultor no podría seguir esta indicación rigu- rosamente porque no le sería posible atender á los diversos 07 multiplicación de los vegetales. cultivos que cada especie requiere y para uniformar sus tra- bajos distribuye sus siembras en épocas fijas que comprenden desde febrero hasta mayo unas y desde septiembre á no- viembre otras. Lo mejor sería sembrarla semilla al desprenderse el fruto del árbol. n:sn. Entendemos por siembra precoz la que se hace con los granos maduros, pero frescos aún, acabados de to- marse del árbol. Se debe hacer esta ciase de siembra, siempre que fuere posible, sobre lodo en los jardines botánicos, con todas las plantas que germinan pronto y sus tejidos endurecen bastante pasa resistir el invierno. iambién se sembraran luego todas las semillas de frutos drupáceos, ó de cubierta córnea que duran basta un año en- terrados, antes de que su cubierta se rompa y permita la salida del embrión. Todas aquellas semillas que pierden pronto su facultad germinativa y que es preciso ponerlas en condiciones de asegurar su germinación, son de siembra precoz. isa. — Como no siempre es posible imitar en la siembra a la naturaleza, y hay semillas que pierden pronto su fa- cultad germinativa se lia inventado la estratificación de las semillas, cu yo procedimiento tiene por objeto colocar aquéllas en condiciones de germinación y que pasen el primer in- vierno sin que sufran alteración. La estratificación es una siembra provisional. Se hunden las semillas en una tierra húmeda de mediana fertilidad, mezclada con un poco de arena, y se guardan en cajones en macetas ó bien en el suelo. Las semillas estarán hundidas unos o 6 0 centímetros. Guando ha pasado el invierno, los huesos se han podrido y roto, y al llegar la primavera se colocan esas semillas en la almáciga ó se siembran de asiento. urgís. La mejor tierra parala estratificación es la de iertihdad media, floja, mezclada con arena y poniendo sobre e a una capa de tierra vegetal, con lo que se procura imitar en lo posible á la naturaleza misma. H.s-s. _ p or rtí gi a general la semilla debe estar enterrada Q8 NOCIONES DE BOTÁNICA, en la tierra en proporción á su magnitud. Como la primera condición déla germinación es que liaya aire, calor y hu- medad, es indispensable que la tierra dé fácil circulación al aire. Las semillas grandes necesitan de 12 á (H) milímetros de profundidad, según su consistencia. Las semillas pe- queñas, hasta cerner sobre ellas una ligera capa de tierra y cubrirlas después del riego. Además, hay que tener en cuenta la naturaleza de las tierras, pues las muy compactas no dejan germinar las se- millas cuando están enterradas demasiado. 135. — La pepinera es un sitio de reserva en los huertos en donde se siembran semillas de todas clases, y donde se plantan estacas, bulbos, con el objeto de asegurar la germi- nación y el crecimiento do las plantas que allí se cultiven hasta la época en que se trasplanten de asiento. a 31». — Las condiciones del suelo son, una buena expo- sición, buen abrigo; la tierra debe ser profunda, fresca, permeable, pero poco fértil, porque si las plantas pasan de asiento á un suelo menos fértil que el de la pepinera se pierden. La pepinera requiere un cuidado y una atención constante para trasplantar en su oportunidad las plantas antes de que desarrollen muchas raíces y sea nocivo al vegetal su extrac- ción. 13 y. — El amelo consiste en colocar una rama con yemas en condiciones de que euraice, ó bien hacer que las raíces produzcan ramas, sin separarlas de la planta madre hasta que tengan vida propia. Las ramas colocadas en la tierra húmeda y al abrigo de luz, pueden dar lugar á la formación de raíces. Las raíces, en condiciones contrarias, expuestas á la luz y al aire, pue- den desarrollar ramas. 138 . — Ei acodo se utiliza como medio de multiplicación en aquellos casos en que no dan resultado los injertos. 130. — Para acodar se han de-elegir las ramas más vi- gorosas, largas y de dos años de edad, para que la corteza pueda desarrollar con más facilidad las raíces. El terreno debe prepararse abonándolo con tierra vegetal para apresu- rar la formación de esos órganos. Cerca de la rama que se MULTIPLICACIÓN DE LOS VEGETALES. 09 ya á ao° (Ia r dche.1 corlarse las otras ramas que pudieran i Id savia con perjuicio del acodo. La tierra debe con- servarse en el mismo grado de humedad por medio de los riegos que necesite. Las plantas delicadas se acodan en el otoño para que ar- vilh Uen en aprÓXima P rimavera como sucede con la bugan- pl ¡cactos ~ L ° S aC ° d0S S ° U dC tl0S ° lasGS : sencil]os Y com- ~ Lo ® aco ? os sencillos se practican con hijuelos ó un —n 0 ” ranias f I ue nacen cerca de la raíz n p l I J l , • 'í'" 1 ríll f 1 í!? Propias, que al separarlos de la planta cmaizaa con facilidad en un sitio separado. Los ren- nueoos ó sierpes son vastagos que nacen de la raíz cerca del ^ mi8m ° y 01 «■— también 1^3. — El acodo por corte de tronco es muy sencillo, pues basta separar de un tronco, corlado cerca de la raíz, los re- lucí os que brotan en él, procurando que lleven raíces que les den vida propia al trasplantarlos. 1 baj d ¿l^r b o i ] C< ]^s t an te l 'ku‘¿? n "ír , G " ÍTJ T o" 1 ! suelo, hundiendo una parte en una zanjadlo á lícenlí- T r, S n C m, Pr r Un i lat ’ y dejand0 4 tierra el extremo ' 1 ' LUUUt) la enraizado bien esta rama, se va cortando poco a poco hasta separarla por completo de la planta madre. 1 Los vegetales sarmentosos permiten un acodo continuo ó sei pen ai /o, que es el mismo en arco, solamente que en lugar de un acodo se hacen dos ó tres con la misma rama, ÍSITd éSo miSmaS PI ’ eCaUCÍOnes al se P ararlos - Paca ase- IJJ. — Los acodos complicados son aquellos en que se KlT? T, ' máúme ’ de punto en donde han de brotar las raíces. le ni; mjd ° r 01 ’ e A stran 9 ulació » es el acodo sencillo al cual se lepone un.bgaduraconun alambre en el centro déla curva 3p|pníl d i eDter - ad ? 011 B ! SU ° b con el ol í¡ e lo de que allí se ° a la savla descendente y favorezca el brote de raíces. 100 NOCIONES BE BOTÁNICA, acodo por circuncisión es también ol sencillo que en lugar de aplicar una ligadura se recorta un anillo do corteza sin interesar la madera. También se bace una muesca en lugar de la ligadura, dejando solo un fragmento de corteza que una los dos extremos de la rama. i -flc;. — El acodo en maceta es un acodo que se practica en las ramas altas que no pueden encorvarse y hundirse en la tierra. Este acodo es muy sencillo, pues basta meter el extremo de la rama en una olla, una canaslila de mimbre, llenas de tierra y agujeradas para dar paso á la rama, suspendiéndolas sobre un tutor ó colgándolas de una rama más alta. Para conservar húmeda la tierra constantemente se coloca al lado de este aparato otra olla con agua dentro en la cual se introduce un trozo de género de lana y el otro extremo se pone en contacto con la tierra. Por capilaridad pasa el agua constantemente de una vasija á otra. l is. — Otro medio más común de multiplicación sonlas estacas. Por medio de las estacas se reproducen los carac- teres de las especies ó de las variedades que son dóciles á este procedimiento, como sucede con las estacas de la vid, (que se llaman sarmientos), las del álamo, etc. B-SS. — Por estaca puede entenderse una porción cual- quiera del vegetal que colocada en condiciones apropiadas de calor, aire y humedad, pueda desarrollar raíces adven- ticias, y al mismo tiempo yemas adventicias. En arbóricultura frutal, se llama estaca á una raíz ó fragmento de rama, que introducida en el suelo, produce ramas ó raíces. 1-ii». — Las estacas de rama son las que se sacan del tallo ó de las ramas, y las de raíz, se toman de las raíces secundarias ó de los rizomas. 15«- - Las estacas de plantón son ramas de 3 á 5 años rectas y que tienen una longitud de 2 á 3 metros. Estas estacas sirven para multiplicar especies que arraigan con facilidad por este medio, como los sauces, los álamos, los eucaliptos, etc. Basta enterrar el plantón en tierra húmeda unos 50 ó 00 centímetros para que arraigue. 151 . — Las estacas de ramo ordinario son trozos de MULTIPLICACIÓN DE LOS VEGETALES. 101 rama que tienen cuando menos cuatro yemas, dos que se hunden en el suelo y dos que quedan al aire libre. ti 53. — Las estacas de siembra son pequeños trozos de ramo que tienen una sola yema y que se confían á la tierra como si fueran semillas, pues la yema que sólo la cubre un centímetro de tierra desarrolla una rama y debajo de aquélla brótenlas raíces. La estaca inglesa ó de un solo ojo es muy usada en la multiplicación de la vid. B5». — Las plantas que pueden multiplicarse por raíces, como el olivo, se corlan en su raíz trocilos que se hunden en tierra apropiada, con el extremo que veía al tronco al aire y el otro extremo hundido en tierra : el primero des- arrolla yemas adventicias y el otro produce raíces. lóJ. — El procedimiento de multiplicación más conocido y el más practicado en todos los cultivos es el injerto. El injerto consiste en aplicar una rama ó una yema sim- plemente, del individuo que se quiere hacer vivir, en otro vegetal que le sirve de patrón ó de sostén comunicándole su savia y con ésta la vida. El injerto sólo es posible entre las plantas dicotiledóneas, y el éxito es seguro si son del mismo género, pero fracasa entre plantas de familias distintas. Es preciso que baya analogía de estructura en el tallo y de constitución en la savia. 3 55. — El injerto es una plantación parasitaria pero en condiciones precisas para el éxito. Si se toma una yema de una planta, cuya variedad se desea conservar y ver lio recer pronto, llevando un trozo de corteza (fig. 85 C), y apli- cándose esta yema dentro de la corteza del árbol que ha de servir de patrón, haciendo una incisión en T (fig. 85 B), y luego aplicando una ligadura arriba y abajo [fig. 85 B) se tiene un injerto llamado en escudete que dará una rama semejante al individuo de donde se ha tomado la yema. Fig. 85. — Injerto en escudete. 102 NOCIONES DE BOTÁNICA. Una vez practicado el injerto las dos plantas forman una s ola, pues la que lia servido de patrón torna del suelo por sus raíces los materiales de nutrición y el injerto desarrolla sus yemas en ramas que florecen y fructifican. !.»<>• — Cuando se hace una incisión en la corteza de una rama joven, se ve que escurre por la herida una materia viscosa que es la savia y tiene por objeto favorecer la cica- trización, tal como sucede con la linfa plástica en las heridas de la piel de los animales. Para que un injerto prenda tiene que llenar las condi- ciones siguientes señaladas por el eminente agricultor D. Buenaventura Aragó ; l l Que haya contacto íntimo entre el patrón y el injerto (vastago ó escudete) sin que se interponga entre las super- ficies en contacto ningún cuerpo extraño. 2 a Este contacto es más seguro en ramas tiernas cuya epidermis tiene bastante tejido celular y la zona generatriz es más amplia. .3 a Debe haber yemas en la púa para que se desarrollen en ramas. ■i a Debe haber analogía de savia entre la especie del in- jerto y la del patrón, lo cual sólo se consigue entre especies del mismo género y de plantas dicotiledóneas. 5 a En tanto prenden las púas hay que evitar su desecación para que la savia del patrón circule por la del injerto. He aquí la razón por lo que es indispensable el conoci- miento botánico de las especies, pues de otra manera, el cultivador tiene que sujetarse estrictamente á la rutina sin poder darse cuenta de los malos resultados en muchas ope- raciones de injerto. Además de las condiciones señaladas, aun hay otras que no deben pasarse desapercibidas y al hacer una elección hay que tener en cuenta si el patrón y la púa que va á injertarse son del mismo temperamento. i ,p » . — Se entiende por temperamento de los vegetales su aptitud pitia sesislir las influencias del clima, es decir, si es rústica o delicada, si su gemación (el brote de las yemas) es precoz ó tardía, si resisten ó no la sequía, etc., etc. También debe procurarse que el patrón y el injerto sean MULTIPLICACIÓN Í)E LOS VEGETALES. 103 de la misma naturaleza, es decir, una púa herbácea en un patrón herbáceo, una púa subleñosa en patrón subleñoso, lo cual se expresa mejor diciendo, hierba con hierba, arbusto con arbusto, árbol con árbol. iss. — La época del injerto varía según el clima y el estado de vegetación de las plantas. Por regla general las estaciones más favorables son la primavera y el otoño; sin embargo en los climas templados se. puede injertar en toda estación con tal que el patrón esté en todo su vigor de gemación, pues lo mismo que favorece el brote de sus yemas favorece el desarrollo del injerto. — Üna vez separada la púa y aplicada en el patrón, según el procedimiento que se elija, se fijará aquélla sobre éste por medio de una ligadura de cáñamo encerado y en seguida se aplica un betún para proteger la herida de la acción del aire. El mejor betún es el siguiente; Cera amarilla 360 gramos Terebentina 360 ■ — Pez de Borgoña 180 — Sebo de carnero 100 — 1000 gramos. (Apagó.) 0«. — Hay un gran número de procedimientos para el injerto, considerándose algunos como de lujo, pues en lle- nándose las condiciones establecidas, cualquier horticultor inteligente modifica los modelos á su capricho. Los injertos se clasifican en tres categorías : I a Los injertos por aproximación, cuyo modelo es el in- jerto agrícola. 2 a Injertos de púa, por vástagos ó por yemas con rama, cuyos modelos son, el injerto de hendidura, el de escudete. 3 a Los injertos por yemas, que se practican en las plantas de llores especialmente. Describiremos algunos injertos de los más usados. *45 a. — El injerto agrícola, que se cree fue inventado por Varron, distinguido agrónomo romano, es el más seguro cuando está bien practicado y se emplea de preferencia en 104- NOCIONES DE BOTÁNICA. las especies rebeldes á otros procedimientos y al injerto mismo. El inconveniente de este injerto es que deben estar cerca una de otra las-plantas, y en la mayoría de los casos sólo se consigue acercando una planta en maceta al otro vegetal que se halle en la tierra ó en otra maceta. Se practican en dos ramas de la misma edad, que sean tiernas y del mismo grueso, dos muescas ovaladas, largas, una en cada rama, interesando la corteza y parle del cuerpo leñoso, y luego se unen las dos ramas procurando que el corte de la corteza de una coincida exactamente con la de la otra rama, para que se establezca la circulación de la savia de una corteza á otra, ligándose fuertemente para asegurar la unión. Al año se corta la rama de la planta que se ba elegido como patrón por encima de la ligadura y poco tiempo des- pués se corla la rama debajo de su soldadura con el patrón, quitándose la ligadura y bañando la herida con el betún. 063. El injerto Silvain, es el mismo por aproximación, Fig. 86. - Seto vivo formado con el injerto Silvain. únicamente que las muescas en lugar de practicarse paralelas á las ramas, se hacen oblicuas de modo que se crucen en X. Se hacen has muescas llevándose un trozo oval de corteza y cuerpo leñoso, se inclinan las ramas y se procura la juntura de los corles, ligándolas después. Este injerto se puede MULTIPLICACIÓN Dli LOS VEGETALES. 10o practicar para formar setos vivos, que al cabo tlel tiempo forman tabiques divisorios en los huertos con los mismos vegetales (fig. 86). í «ES. — El injerto de hendidura sencillo se usa entre nos- otros especialmente para reproducir las variedades de los rosales, pero se puede aplicar á casi todos los árboles. La púa no debe pasar de 12 á 15 centímetros y con algunas yemas, procurando que esté sana, recta y proceda de un in- dividuo vigoroso y bello. En el patrón se hace un corle transversal lo más limpio que fuere posible, y si hay que aserrar la madera se corta antes con la navaja la corteza. En seguida se practica una incisión longitudinal que interese la corteza y el cuerpo leñoso basta la medula poniendo una cuna para separar los bordes de la incisión mientras se co- loca la púa que debe hacerse lo más pronto posible. La púa se taja en el extremo radical (la parle que ve hacia la raíz), en forma de cufia alargada, dejando un lado con corteza y una yema cerc t a del punto donde comienza el tajo. Se coloca hechos en el patrón y púa, procurando que tezas se correspondan. esta cuña entre los corles por sí sola aprieta á la las superficies de las cor- Se liga bien para asegu- rar la adherencia (fig .87) . acs. — Injerto de hendidura doble. Este injerto se practica cuan- do el patrón es bastante grueso para recibir dos púas. Las púas se cortan á bisel pero no se adel- gazan (fig. 88) como en la púa para el injerto simple (fig- 89 , pues el patrón recibe en un mis- mo corle, una púa de cada lado (fig. 90). Si el patrón es tan grueso que pueda recibir cuatro púas, se ha- cen dos cortes que se crucen en ángulo recto y las púas se colocan como en el injerto de hendidura doble.' Fig. 87. Injerto de púa sencillo. Corte de la púa para hendi- dura doble. púa pura hendidura simple. 106 NOCIONES DE DOTÁNICA- 105 . — El injerto de hendidura de Tschndy se practica cuando no sea tiempo de injertar y el método indicado sea el de aproximación. Este injerto se hace eligiendo una rama vigorosa á la cual se le quitan todas las ranillas pequeñas hasta el punto donde se va á practi- car el injerto, dejando debajo de este punto una ramita para que llame la savia hacia el injerto. En el patrón se hace una muesca sin se- parar la lengüeta de corteza y en la púa que será bastante larga se practica otra muesca igual á unos 13 centímetros del vértice. Se acomodan estas dos nuescas encabállele, pues la de la púa se hace en sentido contrario, la del patrón ha- cia arriba y Ja otra hacia abajo, ligándose luego las ramas. El extremo que ha quedado libre do la púa se introduce en una vasija con agua co- locando ésta en un soporte cualquiera, procu- rando renovar el agua cada tercer día. En la pri- mavera inmediata se corla el patrón en la parle de ramas que tenga, arriba del injerto, pues hemos dicho que de aquél se elige una rama que servirá de patrón sin corlarlas demás. Esta circunstancia es la que asegura el éxito así como la provi- sión de agua para facilitar la circulación. b«g. — El injerto de púa sobre raíces se practica en aquellas plantas en las cuales no es posible injertar sobre tronco ó sobre ramas, como sucede con las dalias cuyas variedades se desea reproducir. El injerto sobre los tubérculos de la dalia, se practica ha- ciendo un corle á bisel en la parle del tubérculo que contenga gérmenes latentes que se desarrollarían perjudicando el in- jerto; en seguida se hace una fisura en la superficie del tu- bérculo de modo que se acomode en ella. la púa, la cual es un remito con unas cuantas hojas, y en el extremo que se va á acodar se descorteza en la parte que quedará en con- tacto con la raíz. Se amarra y se entierra de modo que quede cubierto todo el tubérculo. También se puede practicar el injerto sobre raíz siguiendo el mismo procedimiento que para el de hendidura simple. Fig. 90. Injerto fie hen- didura doble. MULTIPLICACIÓN DE LOS VEGETALES. 107 ucs'. Los injertos de púa herbáceos se practican en plantas crasas y carnosas como la siempreviva y los cactus, bastando descortezar lina parle de la púa y otra del patrón y poner las superficies en contacto como en el injerto simple para que de resultado. Tiene este injerto en plantas herbá- ceas la ventaja de poderse practicar enlodo tiempo y exigir menos cuidados que los otros injertos. - — El injerto Faucheux se aplica al injerto del na- ranjo sobro el limonero. Se practica corlando la extremidad de un ramo del ano anterior en el momento que comienza la savia ascendente, y debajo del primer ojo ó yema que quede en el extremo del patrón se hace una incisión en la cual se aloja la púa preparada como para el injerto por hendidura sencilla. flíESD. — Los injertos en escudete de yemas florales y fru- tíferas tienen por objeto festinar la fructificación de los árboles jovenes o de los árboles podados cuyas ramas son estériles temporalmente, utilizando en su crecimiento toda la savia. También tienen l'a ventaja de hacer fructíferas las ramas desprovistas de yemas y por último obtener renuevos jóvenes en árboles viejos y causados. Estos injertos se practican en otoño para que florezcan en la primavera del año siguiente y fructifiquen después. a so. — Los principales cuidados que reclaman los injer- tos se desprenden de la naturaleza misma de la operación. Gomo el injerto es muy delicado y se trata de asegurar que prenda, se le resguardará bajo campana si la planta fuere pequeña ó se le forma un cucurucho si la planta no permite la campana. Se le pondrá un tutor ó bien una rama flexible atada al patrón para que el viento no lo destroce. Si la savia fluye en abundancia se hinchan lós bordes y es preciso aflojar las ligaduras para evitar el estancamiento de la misma sa- via. Si el injerto debe desarrollar un gran tallo entonces se le corlan las primeras ramas que produce para obligarlo á crecer, no así cuando se desea que forme copa abundante pues entonces se le corla la yema terminal para que des- arrolle las ramas laterales. Los injertos se cuidan lo mismo que las estacas, pues hay que atender constantemente á la perfecta conservación de la humedad en la tierra. 108 NOCIONES DE BOTÁNICA. Otras atenciones que requieren los injertos se consultarán en los casos especiales en las obras que traten de la materia. Cuestionario. 12o. ¿De cuántas maneras se pueden reproducir los vegetales? — l q G. ¿Cuántas clases de multiplicación liay ? — 121. ¿Qué cosa es la siembra ? — 128. ¿Cómo se siembran los árboles frutales? — 129. ¿ Qné utilidad práctica tiene la pepinera sóbrela siembra de asiento? — 130. ¿Cuál es la época de las siembras? — 131. ¿Qué condiciones requiere la siembra precoz? — 132. ¿Qué se entiende por estratificación de las semillas? — 133. ¿Cómo se prepara la tierra para la estratificación? — 134. ¿Qué reglas generales hay para la siembra? — 133. ¿ Qué cosa es la pepinera? — 136. ¿ Qué condiciones debe tener el suelo déla pepinera? — 137. ¿Cuál es la reproducción por acodo ? — 138. ¿ Cuando se practica el acodo ? — •139. ¿Cuáles son las condiciones para que tenga éxito el acodo? — 140. ¿Cuántas clases hay de acodos? — 141. ¿Cuáles son los acodos por hijuelos ? — 142. ¿ Cuál es el acodo por corte do tronco ? — 143. ¿ Cuál es el acodo en arco ? — 144. ¿ Cuál es el acodo por estrangulación ? — •14o. ¿ Cuál es el acodo por circuncisión ? — 146. ¿ Cuáles son los acodos altos? — 141. ¿ Qué ventajas llene la rcprodución por estacas ó pies? — 14S. ¿Qué son estacas? — 149. ¿Cuántas clases de estacas hay? — 130. ¿ Qué son estacas de plantón ? — 131. ¿Qué son estacas de ramo or- dinario ? — 132. ¿Qué son estacas de siembra ? — 133. ¿ Cuáles son las estacas de raíz ? — 134. ¿ Qué es el injerto ? — 133. ¿ Cuál es el injerlo en escudete? — 136. ¿Qué condición es indispensable para que el injerto- prenda? — 137. ¿Qué se entiende por temperamento de las plantas? — 138. ¿Cuál es la mejor época para injertar? — 139. ¿Cuál es el mejor betún para los injertos? —160. ¿Cómo se clasifican los injertos? — 161. ¿Cómo se hace el injerto por aproximación? — 162. ¿Cuál es el injerto Silvain ? — 163. ¿Cuál es el injerlo por hendidura sencillo? — 164. ¿ Cuál es el injerto por hendidura doble? — 163. ¿Cuál es el injerto de hendidura de Ischudy? — 166. ¿Cuál es el injerto sobre raíces? — 167. ¿Cuáles son los injertos de púa herbáceos?'— 16S. ¿Cuál es el in- jerto de Faucheux ? — 109. ¿ Qué utilidad presentan los injerios de yemas florales ó fructíferas? — 170. ¿ Qué cuidados requieren los injerios? CUIDADOS DHL CULTIVO. 100 CAPÍTULO DUODÉCIMO Cuidados del cultivo. B ?n . — El trasplanta es una de las operaciones que tie- nen que verificarse en los huertos donde hay pepineras aunque muchas veces conviene cambiar una planta del sitio en donde ha crecido á otro que se estime más conveniente por la razón que á ello obligue el cambio, que es un tras- plante. El trasplante que se bace de las plantas criadas en maceta no da malos resultados cuando se rompe el tiesto, se quila alguna tierra de exceso y se coloca la masa de tierra que pro- tege las raíces en su nuevo sitio. Este solo hecho de expe- riencia muy común entre las señoras que cuidan sus jar- dines domésticos, está indicando la condición fundamental que hay que llenar si se quiere asegurar el éxito en el tras- plante. 1 58. — La misma operación que hace una señora para trasplantar una planta de albalmca, se puede ejecutar con un arbolito ya crecido, con una estaca bien prendida, con un injerto asegurado, con las plantas de la pepinera que hay que llevarlas á su sitio de asiento. Todo el secreto está en hacerlo cuando las raíces no sufran aun cuando éstas estén protegidas por un buen cepellón. Los arbolitos que pro- vienen de almáciga se trasplantan en la época en que no estén en gemación y las demás plantas se cambiarán antes de la primavera salvo condiciones especiales de clima y na- turaleza de los árboles. Antes de cambiar el vegetal se prepara el suelo, abriendo un hoyo en relación con el cepellón que va á recibir y se deja aerear algún tiempo. La tierra con que se cubra la planta será de la naturaleza que exija el vegetal. 1 S 3 . — La plantación se hace confusa , es decir, sin su- lio NOCIONES DE BOTÁNICA. jeción á principio geométrico alguno, o Lien en líneas, siendo dos las principales formas regulares de la plantación que es el marco real y el tresbolillo. ií->- — - Si se cultivasen en un huerto los árboles propios á la localidad, es decir, al clima, serían bien pocos los de- talles de cultivo que exigirían y la esclavitud del horticultor disminuiría notablemente, pero como al lado de los árboles rústicos hay otros que se han aclimatado á fuerza de cuida- dados, es preciso conservar artificialmente su aclimatación, porque si se les abandona degeneran, se pierden las varie- dades y al fin el árbol queda reducido á un porte raquítico y deforme si no es que muere. Lo que se dice en este sen- tido de los árboles frutales y de ornato, se aplica también á todas las plantas ya pertenezcan á la hortaliza ó al jardín de recreo. 1135. — Todas las operaciones del cultivo tienen pues por objeto conservar las variedades aclimatadas dirigiendo los esfuerzos de la naturaleza en el sentido de convertir en plantas útiles las de mediana calidad y dar buen aspecto á las que se desarrollan defectuosas. Estos detalles se llenan Por medio del injerto que conserva las variedades de mejor producción y de porte más bello, y de la poda que es como la educación que recibe el árbol para que adquiera bonita forma y se desarrollo de la manera más correcta y ade- cuada á la localidad. — Los árboles frutales se consideran para su edu- cación ó cultivo estético bajo dos aspectos distintos, bien como árboles que se dejan crecer en libertad, á tocio viento según la expresión hortícola, ó bien como árboles de cultivó L ;uy° crecimiento se va restringiendo anualmente por medio de la poda, permitiendo ésta dar á los árboles algunas formas estéticas elegantes ó convenientes á su desarrollo. Ií? ; Los árboles á todo viento se restringen en su crecimiento en elevación, cortando la rama terminal del tallo á unos 30 centímetros ó dos metros de altura para que al crecer desarrollen con vigor las ramas laterales. J 38 . La poda tiene pues por objeto la provocación del brote de yemas fructíferas haciendo que la savia se dirija á los ramos que convenga al jardinero, habiendo suprimido CUIDADOS DEL CULTIVO. 4 1 1 ]as partes del vegetal que son inútiles ó perjudican la vitali- dad de otras ó bien que le den una forma desagradable. DíSf. — Siendo muy variados los fines de la poda, así son los nombres que recibe, llamándose escamonda la poda de las ramas enfermas ó muertas. ESO. — Aclarar un árbol es quitarle desde que están tiernas, todas las ramilas que al crecer le darían una forma defectuosa. 11 8 H. — Desmochar es quitarla cabeza al árbol, es de- cir, su rama terminal y las vecinas á las ramas principales con el linde provocar el desarrollo délas ramas laterales. asa. — Recepar es corlar el tallo cerca de la raíz en el segundo ó tercer año de la plantación en vivero, para que se desarrollen tallos más perfectos, cuando el primitivo es ne- cesario quitarlo. — Para podar un árbol es preciso conocer bien las ramas que se han de quilar según sea el objeto de la poda. Jtay seis clases de ramas en los árboles : I a las ramas madres que nacen directamente del tallo ó mejor dicho son las pri- meras bifurcaciones del tallo; 2 a las ramas secundarias que son la división délas anteriores, y dan nacimiento á; 0 NOCIONES DE BOTÁNICA. Estas temperaturas se refieren á la temperatura inedia de la localidad en donde pueden vegetar, y se comprende que un vegetal cuya temperatura media de crecimiento es de 18°, no podrá vegetar en un clima cuya temperatura media sea de /i á 6 o . El cálculo de las temperaturas de vegetación se hace sumando la temperatura media diaria de la localidad, desde la germinación de la semilla hasta la madurez del fruto y así se dice que el maíz de eslío, por ejemplo, necesita 2G27 U de calor para recorrer todos los períodos de su vida. El cálculo se hará así : Maíz DE ESTÍO. Temperatura inedia diaria. Junio, 30 días; 20° suman : G00° Julio, 31 » 2-1° » 744° Agosto, 31 » 23° » 713° Septiembre, 30 » 19° » 570° 122 días 2627° Id uso del termómetro es pues indispensable para el cul- tivador, sea cual fuere el ramo de la ciencia agrícola que practique. — En horticultura se da el nombre de suelo á la capa superficial que forma parle de la costra terrestre y que es propia para la vegetación. 3 1 «. — El subsuelo es la parte de terreno que está debajo de la capa de tierra (suelo) en donde vegetan las plantas y es ordinariamente el almacén de la humedad y del calor que necesita la planta, cuando la superficie de la tierra se enfría y se seca. La composición del suelo y del subsuelo varían, siendo solamente propio para la vegetación el primero. 2ii. — Las condiciones de fertilidad de un suelo ó tierra dependen de su penelrabilidad , su profundidad, su con- sistencia, su composición, su poder absorbente para el agua, su permeabilidad, y su exposición ó inclinación. 2 * 2 . — Un suelo es penetrable ó blando, cuando permite que Jas raíces lo atraviesen con facilidad en todos sentidos. La penelrabilidad es sólo una cualidad de la buena con- CUIDADOS DHL CULTIVO. 121 sislencia. Lo mismo que se busca la penelrabilidad del suelo paca las grandes siembras, se debe buscar en una porción de tierra encerrada en una macela. sb:s. — La profundidad del suelo ejerce una grande in- fluencia en la vegetación. Por esto se abren zanjas que se rellenan de tierra para plantas vegetales cuyo éxito desea asegurar el agricultor. Un suelo ordinario debe tener de O m ,75 á un metro de profundidad. Hay plantas que no prosperan en los jardines cuando están en maceta porque les falla extensión y profundidad de tierra para enraizar. 2»-S- — La consistencia de la tierra debe ser tal que el viento no desenraíce las plantas, lo cual sucede en los suelos muy fofos. 2 * ¡». — La composición del suelo varia en cada localidad, y por esto es indispensable abonar, cuando son de mala cali- dad, ó corregir sus defectos cuando son demasiado fuertes. 2 8 <»• — Por regla general puede decirse que la tierra debe contener todas aquellas sustancias, que al hacer el análisis de una planta, se encuentran formando parte del organismo vegetal. Si se analiza un trozo de madera con todo y corteza, después de reducido á cenizas, se ve que contiene : 42 por ciento de agua. Las materias desecadas y reducidas á cenizas contienen : , Carbono '. . 48,00 materias l Oxígeno 42,01) orgánicas. 1 Hidrógeno 0,50 ( Azoe 0,90 Cenizas ó materias minerales 2,60 (*) ai?. — El vegetal necesita muclm agua para vivir y la raíz debe lomarla del suelo con facilidad. Las tierras francas que tienen en proporciones debidas xa (*) Las materias minerales están representadas por potasio, calcio, fósforo, azufre, cloro, fierro, magnesio, sodio, sílice, ele., ele. Como se ve, el carbono y el oxígeno son los tpie dominan en la materia orgánica. El carbono lo toma el vegetal principalmente del ácido carbónico ipic descompone su clorofila bajo la influencia de la luz solar. 122 NOCIONES DE BOTÁNICA. arcilla, la caliza, la sílice, la arena, ele., son las que retienen el agua necesaria para la vegetación y la van cediendo á la planta á medida que ésta la va necesitando, pues el vegetal gasta mucha agua cuando pierde mucha también por la evaporación de las hojas. — El suelo permeable es el que facilita las filtra- ciones, retiene el agua como una esponja, y no como un témpano de lodo. Eos riegos que deben darse á las plantas dependen de las exigencias de éstas para el agua, pero considerando sólo la consistencia y permeabilidad del suelo, se darán riegos fre- cuentes en las tierras arenosas y más tardíos en las tierras arcillosas. S15> - ~ Eos suelos en declive son mejores que los planos porque evitan los encliareamientos del subsuelo que son Jos que más perjudican á las raíces profundas. T~ Eos SUtí l°s se dividen en tres clases según su composición mineral, porque domine alguna sustancia que por sí sola sea impropia para la vegetación. 22 a. — Los sucios arcillosos caracterizan las tierras fuer- tes, y son aquellos en los cuales domina la arcilla, que es un barro pesado, compacto, é impropio para dar vida á las raíces. El suelo ó tierra se llaman arcillosos cuando tienen un 40 por ciento de arcilla. 222 . — Los suelos calizos son aquellos en los cuales do- mina la materia calcárea que proviene de la pulverización natural de las piedras de cal (la creta). Cuando el suelo tiene 40 á 60 por ciento de caliza y parles iguales de sílice y arcilla, para el resto, constituye una tierra franca favorable á la arboricultora. 223 . Los suelos arenosos (así como las tierras) ó si- líceos son muy flojos, sueltos é impropios para el cultivo. 22-1. Cuando en las tierras domina algún elemento impropio para el cultivo, es preciso corregir el defecto, lo cual se consigue con los abonos minerales que mejoran la calidad de los suelos haciéndolos fértiles y apropiados al cultivo que se desea. 225 . — Los mejoramientos mecánicos son aquellos que tienen por objeto modificar Ja consistencia del suelo. Así por CUIDADOS DHL CULTIVO. 123 ejemplo, si el suelo es arcilloso, tenaz, impermeable, se le hace fértil añadiéndole en proporciones convenientes polvo de caliza (creta) y arena. Si al contrario, el suelo es llojo, arenoso, seco, se le hace húmedo y de regular consistencia agregándole una cantidad de arcilla. 2!í. La pasiflora del Brasil cuyo fruto es la granadita de China {Passiflora edidis) tiene flores azules, y el fruto es del tamaño de un huevo con una pulpa muy agradable. Se cultiva en tierra franca, en el invernadero, ó al aire libre en los climas cálidos. . i ^ JÍl P íls '^ ora de] Perú ( Passiflora quadrangularis) a caliza su tallo una altura de 10 á 20 ra con ramas cuadran- 432 NOCIONES DE BOTÁNICA, guiaros, aladas; hojas acorazonadas, enteras, con 6 glán- dulas en el pecíolo : flores aromáticas, de color púrpura en el centro: los filamentos con penachos blancos y violetas. Fruto del tamaño de un melón, su pulpa se come con azúcar. Esta variedad prospera en tierra ligera, pero exige riegos frecuentes ; exposición al Mediodía. Para que fructifique bien es preciso injertarla sobre la pasionaria cerúlea ( Passi flora cceruleá) que es originaria de la América del Norte. Estas dos variedades debieran introducirse en el cultivo de nuestros huertos, la cerúlea para servir de patrón á la cuadrangular. Esta última es también planta de ornato por su porte y sus flores. Cultivo de la higuera de pala 25 a . — En la República son bien conocidas la mayoría de las especies de nopales que dan frutos comestibles. La tuna Cardona es lamas estimada en nuestro país, pues además de ser un fruto agradable tiene aplicaciones industriales impor- tantes y tendrá todavía otras muchas en el porvenir. Con el jugo se hace el colonchi, bebida fermentada muy agradable, la miel de tuna, el queso, y se extrae también aguardiente. Los nopales son excesivemenle rústicos, y es de las plantas que más resisten á la sequía. En el jardín frutal, pueden elegirse algunas especies que He van los mejores frutos según la localidad, y sembrar las palas que pronto prosperan sin cultivo alguno en los cuadros que se quiera cercar con frutales. En nuestro proyecto de jardín botánico que daremos al fin, consignamos un macizo llamado de los Cactus en donde se tendrán las principales variedades de cactus frutales. Una de las variedades de Cactus es importante porque en ella se cría la cochinilla, insecto con el cual se da el color de la grana. Cultivo del naranjo 252. — El cultivo del naranjo despierta ya grande in- terés en nuestro país, debido á que puede prosperar en una CULTIVOS ESPECIALES DE FRUTALES. 133 zona muy extensa, donde la temperatura del invierno no baje de — 4°, á su gran fertilidad y la exuberancia de frutos que son siempre estimados y bien vendidos {fig. 106). La familia de las Auranciáceas tiene un género en el cual hay muchas especies y variedades de frutos exquisitos, el género cilrus. Para el cultivo del naranjo se distinguen dos grupos principales, los que llevan fruto dulce y los que lo llevan agrio. 2 s:e. — Los naranjos de fruto dulce ofrecen muchas razas bien caracterizadas, entre las cuales son dignas de mencionarse las siguientes : •I a Naranjo común ( cilrus aurcinlius) que es un árbol de 12 á 14 metros en el clima que le corresponde, cálido (tem- peratura media) de 18° á 20° grados llevando una copa frondosa, redonda, elegante; flores blancas, perfumadas; fruto esférico, de piel lisa, amarillo naranjado claro ó subido, llena de vesículas que contienen aceite esencial de naranja. Fi". 106. — Ramo del Naranjo. 1 :J4 NOCIONES DE DOTÁNICA. Los cachos en número de ocho á doce contienen muchas vesículas jugosas, azucaradas. Las pepitas reproducen por siembra la misma variedad á que pertenecen. 2‘ 1 El naranjo franco ó silvestre es el más corpulento, y mas rústico pues resiste un frío de ñ á 7 grados. Sus frutos son tan buenos á veces como los do las otras variedades que provienen de injerto. 3 a El naranjo de China que por cultivo produce los frutos más grandes. 4 a El naranjo de Niza , bastante alto y de frutos muy buenos a la vez que hermosos. ú El naranjo de Malta que se distingue por el color de los bultos amarillo rojizo cuando verdes y encarnados al ma- durar; su pulpa, es de un rojo de vino. ¿.i-u. — Los naranjos do fruto agrio son más rústicos que Jos de fruto dulce y se distinguen poco en su aspecto v elegancia unos de otros. J Las principales variedades de naranjos agrios son : el namnjo agrio de hojas de sauce; el N. de fruto corniculado; ív a ? Vl r dc mano J°’ P 01 ' sus flores dispuestas en manojo ■ el A . de frutos sin pepitas; el N. agrio chino ; y el N. agri- E1 naranjo agrio hojas de mirlo , es un naranjo enano que pertenece al culLivo ornamental. 2.«o>. Al cultivo de los naranjos pertenece el de los limoneros, cuyos frutos son más pequeños y agrios. Hay de piel amarillo verdoso ó amarillo claro. El limonero (Citrus limonum ) es un arbusto de gran talla, con ramos delgados y espinosos; llores blancas interior- mente violáceas por fuera; la piel del fruto da el aceite esencial de limón usado en la farmacia. El limonero como el naranjo tiene también muchas varie- dades estimadas más ó menos. 256. — Los cidros que tienen mucha analogía con los limoneros, se consideran dentro del cultivo de los naranjos. La cidra es un fruto más grueso que el del limón, su piel es muy rugosa y tienen una pulpa muy carnosa y densa. Se emplean en confitería y para preparar bebidas espumantes. Las principales variedades son el cidro de fruto dulce, el CULTIVOS ESPECIALES DE FRUTALES. Lio de fruto grueso y el de Florencia que es el más estimado. 35?. — Los naranjos y las especies afines exigen clima cálido us idurns) es un árbol rústico que produce frutos muy estimados y cuyo cultivo exige algunos de- talles, por ser planta perjudi- r , . cial [fig. 111). Jil I rain bu eso es vigoroso en su desarrollo, produce brotes abundantes que invaden el terreno y por razón de su energía vitales planta esquilmadora que perjudica á sus vecinos-lill remedio consiste en hacer las plantaciones de frambuesos en grupos separados de los árboles frutales y así sus raíces no los perjudican. CULTIVOS ESPECIALES DE FRUTALES. 143 El frambueso ofrece cuatro variedades según el gusto de sus frutos : I a el frambueso rojo de los bosques, rústico, con frutos pequeños, pero de sabor dulce y olor suave; 2° el fram- bueso de trutos blancos, que son de sabor ácido ; 3° el fram- bueso do frutos color de carne que son exquisitos; 4° el frambueso de Chile, de fruto grueso y amarillento. El frambueso es un árbol muy rústico que vive bien en todos los suelos, siempre que no sean muy áridos. En el huerto hay que cultivarlo á pleno viento porque le perjudica la sombra, salvo que el clima sea muy cálido. La tierra que conviene á este árbol es la Hoja pero sustanciosa y húmeda. La, multiplicación se hace con las sierpes que brotan al pie ele los tallos viejos; éstas se hunden en una zanja á distancia de una vara unas de otras. La poda se hace cortando las ramas que salen del tallo subterráneo luego que lian fructificado, dejando solamente unas cuatro ó cinco ramas. Cultivo dkl membrillero 3 9' o. — El membrillero pertenece al grupo de las pomá- ceas de la, familia délas Rosáceas, y al género Cydonea cuyo nombre filé dado á osla planta porque se lo creyó originaria de la isla de Candía, la antigua Creta, aunque otros lo re- tieren á la Persi.a, y aun á la China. En todas estas regiones que se le asignan como patria existen variedades del tipo común (eydonia vulgnris ) cuyas variedades no las modifica gran cosa el cultivo, pues los frutos son tan agrios y la carne tan dura, como ló eran en la antigüedad {/íg. 112). El membrillero es un árbol que tiene todo el aspecto y las propiedades de una. planta rústica, por cuyo motivo se cul- tiva en lodos los huertos de la República aprovechándose de los cuidados que so prodigan á los demás frutales. Sin embargo sus frutos son de gran consumo pues sirven para preparar conservas, jaleas y cajetas muy agradables y aun de propiedades medicinales para enfermos del estó- mago. Á los hortelanos les presta el membrillero muy buenos servicios en las operaciones del injerto, porque es el que 14 4 . NOCIONES D13 BOTÁNICA. les sirve de patrón para Iodos ios árboles que llevan fruto de pepitas y sobre todo páralos perales liliputienses. La especie más conocida en nuestros huertos es él mem- brillero común (Cydonia vulgaris ), que se presenta bajo la forma de un haz de ramas más ó menos gruesas que brotan de la tierra. Es un árbol de 2 á -i metros, de raíces ras- treras, tronco rústico, muy flexible en sus brotes tiernos. Los ramos prenden por estaca con mucha facilidad y por lo mismo es uno de los procedimientos más seguros en la mul- tiplicación de este frutal. Las principales variedades cultivadas son : el membrillero macho ú malí forme, que tiene los irutos de la forma de una manzana ; el membrillero hembra ó piriforme , cuyo fruto se asemeja á una pera; el membrillero de China , que e s más bien de ornato en los jardines; el membrillero Orcmgs, el membrillero Bourgeault, son variedades lilipu- tienses, pero entre éstas la más apreciada es el membrillero Jlea’s Mammouth, que aunque liliputiense, lleva frutos muy grandes, redondos como una naranja. ° En I a República se cultiva el membrillero en todos los Fjg. 112. — Ramo de membrillero. CULTIVOS ESPECIALES DE FRUTALES. fia Imeitos, pero según la naturaleza del suelo así son más ó menos «acreditados los frutos. El clima meridional, la expo- sición caliente y abrigada es lo que más favorécela cualidad de sus frutos. Aunque lructiíiquo en suelos áridos y pedregosos, siempre se acomoda mejor á los terrenos algo consistentes y fres- cos. Cuando se utiliza como patrón para el peral no es indiferente el suelo y esta particularidad deben tenerla pre- sente los horticultores. El membrillero se puede trasplantar por siembra en almá- ciga y luego trasplantar de asiento, por acodo, estaca ó sierpes, pero siempre so preferirá la estaca. Aunque sea árbol rustico que abandonado á los esfuerzos naturales se desarrolle y fructifique, si se quiere obtener buena irula, es necesario tener con él todos los cuidados comunes en arboricultora, como son, preparación del suelo, aunque no es indispensable el abono, limpty, riegos y aseo de la planta. No necesita la poda. Cultivo del peral — áil peral silvestre (Pi/ms communis) es uno de los árboles frutales que por el cultivo ha producido el mayor numero de variedades ó mejor dicho de especies hortícolas. El peral es un árbol que á medida que se acerca al tipo primitivo es mas robusto, más alto y su madera más apre- ciada. Mas el cultivo, el injerto y el trasplante, lo hacen perder su robustez y ganar en riqueza sus frutos {/¡g. H3). Los pomólogos cuentan más de 1,133 clases de perales, de las cuales 337 carazterizan variedades bien definidas y 77G son subvariedades ó modificaciones que el clima y el cultivo de otras regiones imprimen á las primeras. El peral común, silvestre en algunos países, es el tipo do todos los perales, y en estado natural es un árbol espinoso do \ á. ñ metros de altura, cuyos ramos van haciéndose lampiños y lustrosos por el cultivo. La carne de la pera se distingue de la dala manzana en que aquélla contiene algunos cuerpos duros, esclerosos, que se 14 6 NOCIONES DE BOTÁNICA, no se encuentran en la de la manzana. Además la pera pudre y la manzana se seca. Los naturalistas clasifican las peras según que se pueden comer en estado crudo ó no : á las primeras las llaman peras de mesa y las segundas para dulce. Las variedades del peral fructifican unas en una estación, otras en otra, y quien tenga todas las variedades es- tacionales puedeco- mer peras maduras en el árbol lodo el año. La época de la maduración lia ser- vido también para clasificarlas. 23 2. — Peras de mesa. Las prin- cipales variedades de estas peras son : Pera de San Juan, Pera Moscalelilla, Pera de San Miguel ó de Julio, Pera Moscatel real, Pera de Dama, Manteca blanca, Verlalonga, Buen Cristiano, Manteca de los bosques, Bergamota, Verdilarga, Adela, María Luisa, Luisa-Bona, Bona-Luisa, Manteca real, Man- teca roja. 2 3 :s . — Peras para dulce : Bellísima de Invierno, Beal de Inglaterra, Pera todo tiempo, Morisca, etc. 234. — Siendo un árbol rústico, el peral se cultiva á lodo viento y la espaldera lo perjudica. Algunas clases de perales tienden á la rusticidad cuando no se han injertado y adquiere un porte soberbio, y de una fecundidad enorme. El peral se presta ú las formas especiales en pirámide y Fig. 113. — Hamo del peral. 147 CULTIVOS ESPECIALES DE FRUTALES. plVsUa’nS llÜl ' lÍCUl í 0l ' eS cUsLÍn 8' uei1 bien ^ clases que se Maíí l J U,1 f s lü, ' inas ( l L| c il otras. Así por ejemplo, M.u i,i Luisa para el gran tallo, Duquesa de Angulema para esínklera' T ^ ^ ¿«san tÍ nhlí '■ Bon - tt ' , WÍIlkms - etc., para cordón ¿orí- zoiitcil, oblicuo o vertical. el ?nWi7,.n 1 rl" ej0r me í i0 . de imiUi Plicación del peral es el injulo en flanco es decir sobre olro peral que sirve de {SÍ7SJ- 0 . convenga el memírillerJ El mem! vina siempre que el suelo le sea favorable ¡.na ff ™nrXS LÍBn * ^ Varie,lad i ^ eplada * propagar las variedades ’dó alio Uillo° S " ll1 CUaiKl ° seqLuero La multiplicación por siembra sólo se hará para obtener patrones para el injerto. 1 omuiei «mi J dos^casos •’ n e !!-, a !', b01,ÍCUl 1 LH ’ a Ia siombra súl ° se emplea n dos casos, paia buscar nuevas variedades ó para obtener patrones para el injerto llamado en franco. árl Srmielíin **■ t . ltíl Jc ;' ul;l ’ especialmente en aquellos ai lióles que están sujetos a nm i , • , i.. n ¡„.- im ;b 0 ol . d , una loi ma determinada como a piiaimde, el vaso, la hoja de palmera. Cuando se les deja crecer a todo viento sin tocarlos, la poda no es necesar Í? pues el equilibrio de la circulación de la savia se eslalíleS con regularidad por las solas fuerzas naturales. bipn^ln PraCllC e ÍU ’ k r ¡° da del P eral es preciso distinguir íen las yemas que dan ramos y follaje de las que dan llores y fruto, para restringir el mujo de las primeras EsLa ,l disr ben!in i V aVla C ° n dell ' imenl ° de ]a fructificación. Esta distinción de las yemas es preciso hacerla en el árbol y que las muestre un arboricultor muy experto. Y Ct l.xno DE T.A I'IÑA I)E AuilíniCA ^' l P* na americana ó Anana ( Bromelia anana A es una planta que pertenece á la familia de las Bromeliáceas J mmque su cultivo es delicado, debiera b.tenta," en iod ns nociones be botánica. La pina es como el higo, el Lulo lo constituye una inflo- rescencia (la inflorescencia y fruto en pifia) formada por los ovarios y las brácleas que los cubren, de consistencia cai- nosa y agrupados al rededor de un eje ó rachis como si fuese una espiga muy comprimida, llegando a adquirir el tamaño de un melón mediano. La pifia es un fruto exquisito y su cultivo además de ser produc- tivo, es un elemento de ornato en los jardines, pues es planta muy her- mosa y gallarda. Como es planta que exige un grado de calor artificial muy elevado, es indispensable culti- varla en estufa ó cerca de losinvernaderos, aun- que el medio más sen- cillo es cuidarla en su desarrollo y crecimiento sobre un se- millero templado cubierto con hojarasca cuando tierna y más larde con toldo. El mejor medio de multiplicación de la pina, y que nos ha dado buen resultado en el jardín doméstico, es por la corona, vulgo cogollo , que está en el vértice del fruto. Se separa esta corona con cuidado y se planta inmediatamente en una maceta en donde se deja si se quiere tener como planta de adorno ó se trasplantan al suelo pasado el primer invierno si se quiere que fructifiquen bien. El retoño se. puede usar también para multiplicación do la pifia, enterrándolos basta la mitad en la tierra preparada con un año de anticipación, lo mismo que paralas coronas. Esta tierra se hace mezclando SO partes de tierra negra de huerto, 25 de arena fina de río, 20 de estiércol de cabildo- riza, y 5 de cal apagada. Se mezcla bien, se humedece por encima el montón y se deja un año, removiéndolo varias veces un mes antes de usarlo. CULTIVOS ESPECIALES DE FRUTALES. 1Í9 Si se linee un plantío ile aminas, entonces se trasplantan de sus macetas ó cajones donde han adquirido fuerza, cui- dando de no lastimar las raíces que irán protegidas por un buen cepellón, a la cama de plantío que ya se tendrá lista. Entonces se las coloca a un metro de distancia unas de otras en todos sentidos. A las tres semanas las plantas que han agarrado están lozanas y esas florecen y fructifican el ano siguiente. Las ananas exigen además de calor tierra húmeda, lo que ■se consigue con riegos adecuados para conservarla en ese es U'iuo. Los invernaderos de ananas, en los climas fríos, se construyen con suma facilidad. Constan de una pared de ladrillo de 2 metros de altura y otra en frente de un metro o menos de alto á una distancia conveniente para que quede entre ellas la cama y espacio para que el cultivador pueda cu hLii el plan lío. Ln el suelo se abre un foso de un metro de hondo por 2 metros o poco más de ancho, se cubre el loso con liona de huerto en su mitad y la otra con tierra para pifias. L;t parle superior se cubre con vidrieras, con mantas ó con lo que esté al alcance del cultivador. Si el frío no es intenso bastará este abrigo solo por la noche, pues en el di - — La tierra para legumbres no debe ser fuerte sino de mediana calidad que es donde los frutos aunque tardíos vienen más nutridos y sabrosos. Si la tierra fuese muy ligera se le abona poco á poco, prefiriéndose el humus 1H2 NOCIONES DE BOTÁNICA. ó tierra vegetal al estiércol, salvo los cultivos especiales que lo exijan. Si la tierra es muy fuerte y tenaz se le rebaja con arena, caliza ó se pone una capa de tierra común. La tierra común es la tierra arable donde prosperan las gramíneas que enraizan poco y dan sin embargo buenos frutos. 2®», — En un jardín de legumbres cercado por muros que no sean muy altos ó con calles de árboles frutales que presten sombra al suelo, se tienen todas las exposiciones para el cultivo, pues la exposición del mediodía se tiene por el lado del muro que ve al norte, la, del norte se tiene cerca del muro que ve al sur y así de los demás. Ya dijimos que para evitar los inconvenientes de las malas exposiciones con- vendría orientar los jardines colocando los muros hacia los puntos cardinales. Además, los mismos cuidados que se tienen para proteger los semilleros, las pepinerasy los plan- tíos tiernos de frutales caben en el cultivo de las legumbres. 2* a • — Como las plantas que se cultivan en la huerta se reproducen por siembra, ésta es la operación más impor- tante en este cultivo. Si el terreno es grande y la siembra extensa, se practica al voleo, pero siempre que'la semilla lo permita por su magnitud. El precepto más general de la siembra lo mismo para hortaliza que para, llores, es que la capa de tierra que cubra las semillas no debe exceder sino unos Lres ó cuatro tantos de Su tamaño. Una vez bien mullida la tierra, se hacen con el dedo unos pequeños surcos ó bien unos hoyitos si se hace en maceta la siembra, se depositan en el fondo del surco ó del hoyo las semillas y luego se cubre con una capa de tierra esparcién- dola con ia mano ó con un harnero. — Cuando no se tienen que mover las plantas del lugar en que se siembran, se llama de asiento la siembra. Si al contrario hay que cambiar las plantilas una vez que han germinado y crecido un poco, para colocarlas á una distan- cia conveniente, entonces se dice que es siembra para repicar las plantas, y la operación de cambiarlas se llama repicado. Algunas veces las plantas repicadas sufren un nuevo tras- plante antes de llorecer y entonces se dice que se trasplan- tan de fijo. ' CULTIVOS ESPECIALES DE LEGUMBRES. IB 3 383. — Cuando se quiere activar la vegetación, la siembra se hace en los costeros y si se quieren frutos precoces hay que sembrar y cuidar las plantas antes de su trasplante de lijo en las camas calientes. Si son plantas de crecimiento rápido y las inlluencias atmosféricas las perjudican, se les protege con albitanas ú otros medios ya bien conocidos de los horticultores en cada localidad. 3S-B. — El riego es una de las operaciones que exige gran cuidado en la huerta y más aún en el cultivo de las llores. Para saher cómo se ha de regar con más facilidad y menos trabajo, una huerta que no sea muy grande, es pre- ciso tener en cuenta las consideraciones siguientes : Si el terreno es húmedo por su propia naturaleza, los riegos tienen quesee poco frecuentes; Si el terreno es muy poroso y deja evaporar con facilidad el agua hay que regar cada dos ó tres dias y aun diariamente en ia época del calor más fuerte. 385. — Para hacer el riego diariamente, se elegirá el ; medio día en la estación de la primavera ; en el otoño se riega por la mañana porque las noches son frescas y el riego es inútil, en tanto que en el estío es preciso regar por la tarde > porque durante el día se evaporaría el agua sin empapar la tierra. La manera más fácil es con regadera, lomando el agua de un tonel y pasando la regadera por todas las plantas hasta que se humedezca bien el suelo. 3S«. — Si el terreno fuese grande se pondrán barriles enterrados en los ángulos de los cuadros y comunicando por medio de tubos de barro ó de hojalata para que se llenen todos los barriles echando el agua en el que esté más cerca del pozo, noria, ó toma de agua que fuere. Así se evita mu- chas vueltas el jardinero y tiene agua siempre á su alcance en una pequeña extensión. 38». — Si el terreno está en declive, se hacen zanjas de 40 centímetros de ancho y se canaliza con ellas todo el te- rreno, encerrando en pequeños cuadros grupos delegumbres, y lodo el trabajo consiste en abrir la primera compuerta en la parle más alta é ir dirigiendo la corriente abriendo y ce- rrando bordos según convenga. Este sistema se llama por 4ü4 NOCIONES DE BOTÁNICA. imbibición y es el practicado en casi lodos los huertos y huertas de nuestro país. — - Cuando las plantas han fructificado y madurado hien los frutos, se eligen las más robustas y con frutos mejor hechos para reservarlas y recoger la semilla. Si el fruto tiene una dehiscencia natural que al secarse arroje lejos de sí los granos, se les envuelve, cuando ya empiezan á secar, en un cucurrucho de papel amarrado al pedúnculo. Si la dehiscencia se hace, la semilla no se pierde. — Todo jardinero cuidadoso tendrá un armario especial en donde guarde la cosecha de sus semillas, con cspresion de la planta á que pertenecen y la época de la recolección. 25»i». La semilla conserva su facultad germinativa un tiempo determinado, variable para cada especie, lo cual debe anotar el horticultor en su libro do apuntes de semillas recolectadas ó compradas. Cuando compre semilla siempre deberá calcular que lleva ya un año guardada en almacén, aun cuando se asegure que es de la cosecha pasada, pues e^lo lo afirman los vendedores seguros de que las semillas que tienen en depósito conservan su facultad germinativa dos, (res. hasta seis años. Pero el horticultor debe sabor que la. facultad de germinar es muy variable de una semilla de planta á otra. Así por ejemplo, la facultad germinativa sólo dura, un año en la chirivia, escorzonera, guisantes, perifollo, ruibarbo, po- diendo alcanzar dos anos si provienen de plantas bien culti- vadas yen tierra muy buena. En la cebolla, chirivia tudesca, frijol sin vaina, mejorana, pimpinela, puerros, salsifí, lo- millo, dura dos años. De dos á tres años se conserva eu la col marina, habas sin vaina, lenteja y perifollo. Tres anos dura en Ja borraja, fresa, patata, perejil y de tres á cuatro en la acelga, espárragos, espinacas, lechuga, nabo y zanahoria. De cinco á seis años dura en la achicoria, calabaza, cardos, coles, habas con cáscara, melón, pepino, rábano. 3!M. — Antes de señalar las peculiaridades de los cul- tivos de algunas legumbres nos ocuparemos de dos pro- ducios que siempre compensan el trabajo del cultivo por su CULTIVOS ESPECIA LES DE LEGUMBRES. iüS estimación en el mercado, nos referimos ¡i los hongos co- mestibles y á los espárragos. Los hongos, setas ó agáricos , son un producto natural de toda tierra húmeda y con materias en fermentación. En el campo, en los estercoleros, en los muladares, en el tronco de los árboles carcomidos hay hongos de muchas clases. El hongo tiene un veneno acre muy activo, que si no se expulsa pronto por el vómito causa la muerte en medio de los tormentos más atroces. Todas las reglas indicadas pol- los gastrónomos para distinguir los hongos venenosos de los comestibles son inciertas y como regla absoluta toda persona debe abstenerse de comer hongos del campo y reservarse para hacerlo solamente con los cultivados expresamente. Varias ocasiones hemos prestado nuestro servicio profe- sional á personas envenenadas por los hongos, sin embargo de asegurarnos que estaban acostumbradas á comerlos y sabían distinguirlos. El bongo es fuerte, pesado, de difícil digestión y tanto más si es ya viejo. Guando después do comer bongos (cinco á diez minutos) se experimente pesadez, ardor de estómago, vértigo y náusea, si no se tiene garantía en la bondad del producto, lo mejor sera provocar el vómito basta dejar enteramente limpio el estómago. Sí sus. — El cultivo de. los bongos comprende dos opera- ciones bien distintas, la primera es formar el estercolero y luego preparar con él las camas de bongos. sítKS. — La. preparación del estercolero es la parle más esencial del cultivo si se quiere asegurar el éxito y para ello se toma estiércol de caballo bien humedecido con orines y se lo limpia de toda la viruta de paja y basura extraña que contenga. La estación más á propósito es la primavera, y si no se puede en-ésla so hará la preparación en el otoño. Se extiende el estiércol por capas apelmazándolo con los pies, basta darle un espesor de 1"‘,20, siendo tan largo y ancho como se quiera. Este montón debe quedar durante -10 días en fermentación, lo cual es bueno si no se lia dejado ni muy seco ni muy húmedo. Al cabo de este tiempo está blanquecino en su centro y algo también en la superficie; se le remueve perfectamente y S e le riega si está algo seco, lo6 NOCION US D 13 BOTANICA, pero sin encharcarlo. Se le deja reposar y al cabo de oíros diez días se repile la misma operación de removerlo, revol- viéndolo bien, limpiándolo de todas la basuras y humede- ciéndolo cuanto sea necesario. Pasados cinco ó seis días se reconoce el estiércol para ver si está de punto, pues de osle estado del terreno en que se ha de desarrollar el hongo de- pende todo el éxito. Cuando el estiércol está ya de un color moreno azulado en el interior y al tornarlo entre los dedos no deja escurrir agua, pero si se siente grasoso y se desmo- rona con facilidad, entonces ya está en condiciones de ser empleado para sus usos. Debe tenerse en cuenta ipie cuanlo mayor sea la cantidad de estiércol que se ponga á fermentar, más perfecto será éste. Para asegurar el cultivo y no tener que hacer camas de abrigo, á la sombra, en la primavera, ó exponerlas al me- diodía isa el otoño, lo mejor será destinarles una pieza, hú- meda, abandonada, ó construir un jacalón económicamente, pues los hongos prosperan en sitios cerrados, oscuros y húmedos, donde la temperatura no cambie. 2ss í Las camas se preparan del largo que se quiera., según el terreno de que se disponga, dándoles una anchura detíü centímetros y la misma altura en medio, pues se aplana Fig. 115. — Cania pata ul cultivo de los bongos. por los lados en forma de lomo de asno 1 15). Cuando la temperatura de la cama, tiene 52 grados centígrados, se hacen agujeros de tres dedos de ancho por otros tantos de profundidad, á la distancia de O”, 33 unos de otros alter- nándolos de las hileras respectivas como los cuadros negros del tablero de damas. En eslos agujeros se introduce el 157 CULTIVOS ESPECIALES DE LEGUMBRES. blanco ele setas del mismo tamaño que el agujero y se cubre cou el mismo estiércol que se lia sacado. 3S55. — El blanco es el germen de los bongos, que pro- viene del estiércol impregnado de filamentos blanquecinos y que se guarda en panes como si fuese semilla. Este blanco dura muchos años y se llama blanco virgen el que se toma de un estiércol que no ha criado bongos. 3©«». — El blanco ó germen también se puede preparar previamente, excavando cerca de un muro que tenga expo- sición al medio día un boyo de 70 centímetros de hondo en cuyo fondo se pone una capa de estiércol ya enmollecido con eflorescencias fungosas y encima se le echa una capa de estiércol de caballo ó burro, bien limpio, se aprieta, se le riega (con orín de caballeriza mejor; y se cubre con la. tierra sacada del hoyo. Después de un mes se tiene ya el blanco virgen que se corla en pedazos y se guarda, podiendo durar muchos años su propiedad reproductora. Cuando las camas están el aire libre hay que cubrirlas con una camisa de musgo, paja ó cualquier objeto fácil de le- vantar para inspeccionar la siembra. 3»?. — Á los diez días de hecha la siembra deben co- menzar á formarse los filamentos fungosos en contorno del blanco y entonces se riega, cubriendo de nuevo la cama con una capa de tierra fría de 1 centímetro de espesor. Si no hubiere prendido el blanco es un indicio que éste no está bueno ó que la cama no tiene todas las condiciones para el cultivo. 2»s. — A las seis semanas se puede hacer la primera recolección de hongos, y se continuará cada dos ó tres días por espacio de cuatro ó cinco meses. Las setas que han adquirido el volumen que les sea propio, según las especies, el tamaño de un huevo ordinario de gallina ó de paloma es el más común, se corlan, cubriendo de nuevo con tierra el sillo que ocupaban. 3»». — Los aficionados que deseen cultivar los hongos sólo por curiosidad ó bien para, comerlos con toda tranqui- lidad, sin tener que recurrir á sitios abrigados expresamente para este cultivo, pueden formar una ó varias camas al aire libre en un rincón de su huerto. Se proveerán de alguna lo8 NOCIONES DE BOTÁNICA, cantidad de boñiga de vaca á la cual se lo mezcla una poca de caballo reciente pero ya seca, se desmorona sin reducirla enteramente á polvo y se forma una cama colocando capas alternas de'boñiga y de tierra de huerto. El secreto consiste sólo en el riego, que se hará siempre con agua nitrada la cual se prepara disolviendo 500 gramos de salitre en un barril de agua para una cama de dos varas y media de largo por 60 centímetros de ancho y otros tantos de alLo en el centro. Si el montón ó cama se hace contra el muro, en ese Punto tendrá los 60 centímetros de alto poro puede dárselo mas extensión al plano inclinado. Se riega la cama después de hecha, se deja evaporar un poco el agua de la superficie y se cubre con la comisa de mustio. Cüi.tivo ni! i.os i!si’Ánn.\ons . 3©o. — El espárrago (. Asparagus offtcinalis) pertenece á la familia de las liliáceas : su cultivo adquiere interés cada día por la demanda que tiene en el mercado. El espárrago se reproduce por semilla, y se forma una pepinera de la cual se loman cada año los brotes ó tallos que nacen en su raíz vivaz llamada garra ó pala. Las principales variedades que ha producido el cultivo son : ■I" El espárrago precoz de Argenleuil, que es más produc- tivo y más precoz que el de Holanda. 2' a El espárrago mediano, que es más hermoso que los otros. 1 3 a El espárrago tardío de Argenleuil, que lleva esto nombre porque dura más tiempo dando fruto. -Sí» a. La siembra del espárrago se hace en pepinera, eligiéndose tierra abonada, arenosa y bien limpia, y deposi- tando los granos en surcos separados por un espacio de 0"',25. Si la tierra está seca se riega para conservar una humedad conveniente. Los espárragos duran dos años en la pepinera y al cabo de este tiempo se trasplantan de asiento. Para la siembra de asiento se excavan fosos de 1 metro y de 1 ra , 60 de ancho, por el largo que se quiera. Este foso se llena de tierra de huerto, algo arenosa, para que sea más CULTIVOS ESPECIALES DE LEGUMBRES. j ;j g permeable, pues la raíz del espárrago se hunde hasta ü ,u 70 en una tierra que le sea adecuada. El espárrago teme' la humedad del subsuelo porque pudre su raíz. En este terreno se trasplantan los espárragos de la pepinera ó se plantan las garras anuales que produce la raíz del espárrago de edad. Se colocan las plantas á 0"',3Ü unas de otras alternando las de una hilera con las de la hilera vecina. Estas plantilas se cubren con tierra formando una capa de ocho á diez centí- metros de espesor. «os. — Pasado el primer año en la siembra de asiento se mueve la tierra limpiándola de todas las hierbas extrañas que hayan nacido y todos los brotes se corlan en el invierno á una altura de tres centímetros á flor de tierra y se vuelve á poner otra capa de cinco centímetros de espesor. «o«. — Al comenzar el segundo año se descubren los espárragos quitándoles la tierra de las capas con que se ha- bían cubierto, y se pone en su lugar estiércol bien abonado y podrido. Así se procede el tercer año y en la primavera del cuarto año se pueden ya cosechar diariamente espárragos muy buenos. «ís-£. — Una esparraguera bien cuidada dura de quince á veinte años dando productos anualmente. :Sí»5. — La ventaja de la esparraguera consiste en que se puede tener entro los frutales, pues formando tablas pe- queñas entre los árboles no perjudican en nada á los ár- boles y se tiene un producto seguro y de estimación durante muchos años. «smí. — La recolección de la semilla es delicada, pues es preciso dejar crecer los primeros espárragos que vengan ro- bustos y lozanos, hasta que asemillen. Luego que las bayas están maduras se ponen en una vasija con agua y se limpian de la carne que envuélvalas semillas ( fúj . 50). Cuando está limpia óslase pone á secar y luego se guarda preservándole muy cuidadosamente de la humedad. ¡mv. — Para cosechar el espárrago, se observa diaria- mente los brotes ó turioms que sobresalen y con un cuchillo aserrado se corlan con cuidado á flor de tierra, cuidando de no lastimar los brotes que vienen cerca á flor de tierra. Se forman manojos y se pueden conservar hasta ocho días po- ICO NOCIONES DE BOTÁNICA. niéndolos sobro una capa de arena en un lugar abrigado y oscuro. sos. — En los climas cálidos se pueden cultivar los espárragos en las costaneras construidas contra la pared y expuestos hacia el mediodía. La plantación se hace como queda dicho y los cuidados son los mismos, pues sólo en el invierno hay que resguardar el esparragal del rigor del frío. El espárrago forma un alimento de lujo que tiene mucha estimación en las comidas de tono, y á esto debe su gran prestigio en beneficio de los cultivadores. 3tn>». — El espárrago tiene propiedades diuréticas bien reconocidas y los enfermos de reumatismo, gola, ó catarro vesical bien pueden acostumbrar el espárrago en su alimen- tación, pues les sirve como medicina diurética y calmante. Cuestionario. Sti. ¿.Qué utilidad ofrece el cultivo de la huerta? — 1 278. ¿ Qué terreno e? el más apropiado para las legumbres y plantas de hortaliza? 279. ¿Qué condiciones debe llenar la tierra de la huerta? — 280. ¿Qué exposición debe tener la huerta? — 281. ¿ Qué importancia tiene la siem- bra en la huerta ? — 282. ¿Cuál es la siembra de asiento? — 283. ¿Cómo se activa la vegetación de las legumbres? — 284. ¿Cómo y eu qué tiempo se debe regar una huerta? — 285. ¿A qué lloras del dia debe regarse? — se ^' s P onen les toneles para hacer el riego en regadera? — 287. ¿Cómo se hace el riego por imbibición ? — 288. ¿Cuándo se hace la recolección de las semillas? — 239. ¿Qué hará un jardinero con la se- milla ? — 290. ¿ Cuánto tiempo dura la facultad 'germinativa en las se- millas? — 291. ¿ Dónde se producen los bongos naturalmente ? — 292. ¿Oné operaciones comprende el cultivo de los bongos? — 293. ¿Cómo se pre- para el estercolero ? — 294. ¿ Cómo se prepara la cama de hongos? 29o. ¿ Que es el blanco de bongos ? — 290. ¿Cómo se prepara el blanco de bongos? — 297. ¿Cuándo comienza la multiplicación del bongo? 298. ¿Cuándo se hace ia primera recolección ? — 299. ¿Cuál es ef medio mas iácil de cultivo para los aficionados? — 300. ¿ Cuáles son las varie- dades de espárrago cultivadas? — 301. ¿ Cómo se siembra el espárrago? — 802. ¿ Qué se hace en la esparraguera pasado el primer año ? — 303. ¿ Y en el segundo y tercer año? — 304. ¿ Cuánto dura una esparraguera? — •iOo. ¿ Qué venlajas ofrece la esparraguera ? — 300. ¿Cómo se recoge la simiente del espárrago ? — 307. ¿ Cómo se cosechan los espárragos? — 308. ¿ Cómo se cultiva la esparraguera en los climas cálidos ? — 309. ¿Qué propiedades tiene el espárrago ? CULTIVOS ESPECULES DE LEGUMBRES. ict CAPÍTULO DÉCIMOQUINTO Cultivos especiales de legumbres [continúa). 3 en. — Para hacer más práctico el estudio de las legum- bres cultivadas las clasificaremos según el uso al cual se destinan. 1° Plantas que se cultivan para utilizar sus raíces. QO » » hojas. 3 o » » » flores. 4° » » » frutos. 5 o )) » » bulbos. 6 o » » » varias parles á la vez. I o Plantas que se cultivan para utilizar las raíces Chirivia, Salsifí, Escorzonera, Nabo, Rábano, Remolacha, Zanahoria. ttBB. — Chirivia tudesca ( Sium sisarum ). Esta planta pertenece á la familia de las Umbelíferas, y se distingue de la Chirivia ó pastinaca (. Pastinaca saliva ) que también tiene raíces comestibles, pero es muy superior la tudesca. La chirivia tudesca es planta vivaz que se reproduce por simiente en terreno fértil, fofo y húmedo. Los riegos han de ser frecuentes en las tierras secas, y en las húmedas hay que conservar el mismo grado de humedad. Se siembra en surcos, remojando antes las semillas por espacio de 30 horas, para que germinen pronto. La recolección de la simiente se hace en plantas bien cre- cidas y sólo de las umbelas superiores ; se desgranan con facilidad, se secan y se guardan. La siembra se hace con semilla de un año pues al siguiente pierde sus propiedades germinativas. 2S7 11 ■i 62 NOCIONES DE BOTÁNICA. La chirivia tiene los mismos usos que el salsifí y la escor- zonera. El sabor Je la raíz es dulce. 3*3. — Salsifí ( Fragopogon porrifolius) de la familia de las Compuestas. Esta plañía se siembra y se culliva lo mismo que la cbirivia tudesca, pero es planta bisanual y las si- mientes sólo conservan sus propiedades uno ó dos años álo más. La cosecha de las raíces se hace siempre antes que comiencen á fructicar las plantas. 313. — La escorzonera de España ( Scorzonera Hispánica ) tiene una raíz negra, se cultiva lo mismo que la chirivia y el salsifí, únicamente la cosecha se hace hasta los dos años. 31 •• — El Nabo ( Brassica napus, de las Cruciferas), el llábana {Raphanus salivus, de las Cruciferas también), la Remolacha ( Reta vulyaris, de las Quenopódeas), y la Za- nahoria ( Daucus carota , de las Umbelíferas) son plantas que se cultivan por sus raíces, que tienen usos más amplios que Jas anteriores, pues unas sirven como forrajes y otras tienen aplicaciones industriales, como la remolacha para fabricar alcohol y azúcar. Estas plantas con excepción del nabo, que ama los suelos ligeros, se cultivan en tierra de huerto, bien abonada, se multiplican por siembra y se recogen sus raíces antes que maduren los frutos 1 . 2 o Plantas que se cultivan para utilizar las iiojas ó las iiojas y los tallos Coles, Escarola, Lechuga, Espinaca, Acedera, Acelga, Apio, Cardo, Chayóte, Perejil. 3 * 5 . — Col. ( Brassica olerácea, de la familia de las Cru- ciferas). Esta planta, originariamente única en la especie, ha pro- ducido por el cultivo las clases siguientes según Aragó. I a Coles de repollo de hojas lisas y de color verde claro. 2 a Coles de Milán de hojas rizadas y de color verde oscuro. 1. Véase Nociones de agricultura del autor, para el c.illivo de estas raíces. lt¡3 CULTIVOS ESPECIALES DE LEGUMBRES. 3“ Coles verdes ó berzas que carecen de repollo. 4“ Colinabos ó coles de raíz carnosa. 5 a Coliflores y bróculis. Cada una de estas clases ofrece variedades según los cul- tivos de cada localidad. Las coles prosperan en los terrenos sustanciosos, abona- dos pero poco húmedos, prefiriéndose las tierras flojas para los colinabos que necesitan ensanchar su raíz holgadamente. La col se siembra en semilleros de germinación que serán camas calientes en invierno ó al aire libre en cualquiera otra estación. Cuando han nacido se trasplantan de asiento en el terreno ya preparado para recibirlas. Esta operación se hace generalmente á las seis semanas. Las coliflores son más exigentes, pues el suelo debe estar bien mullido, abonado con estiércol y conservado en cierta humedad que no enlode la tierra. v Los usos de la col son bien conocidos, pero en nuestro país no se prepara aún la col agria ó choucroule que es de estimación muy general en Europa. Se prepara rebanando las coles de repollo en tiras finas y poniendo capas alternas de col y sal en un barril, en donde se fermentan. Se les pone una losa que comprima bien las hojas y á los quince días puede ya comerse como ensalada para las carnes frías y ahu- madas. 3ic. — La lechuga ( Lactuca saliva, de la familia de las Compuestas) ofrece algunas variedades por el cultivo, como la lechuga de Silesia, la lechuga de Holanda, la lechuga im- perial, la lechuga de Italia, la lechuga amarilla, la lechuga blanca, etc. La lechuga ama las tierras fuertes, de mucho fondo y esponjosas. El riego es necesario para que soporten el sol. Se siembran en semillero en invierno y por lo mismo hay que abrigarlas mientras germinan las semillas. Luego que la planta tiene cinco hojas se trasplanta de asiento y se le dan los cuidados comunes á las demás hortalizas hasta que llegue la época de la recolección. La lechuga es de un uso muy generalizado como ensalada y su cultivo os también de los más conocidos. 104 NOCIONES DE BOTÁNICA. 3 17. — La acelga {Beta cicla), el apio (. Apium graveo- lens), el cardo ( Cgnara cardunculus), la espinaca ( Espi - nacea oleráceo), el perejil [Apium pelroselinum) y oirás ele menos importancia como la acedera, el chayóte , etc., son plantas que se cultivan para emplear las hojas en ensalada ó condimentar los guisos. Se cultivan como sus congéneres, así pues en la huerta se les puede destinar una sección ó cuadro en donde se dividen los cultivos de estas especies, colocándose en una línea ó faja las que exijan más riego y un poco más lejos las que necesitan menos agua. 3 o Plantas que se cultivan para usar las flores 3íS. — La alcachofa ( Cgnara Scolymus, familia de las Compuestas) es una planta enraizante, vivaz, que requiere tierra profunda y muchos cuidados sobre lodo en los climas fríos. El cultivo ha producido algunas variedades, pero las prin- cipales son la alcachofa blanca y la alcachofa inorada. La alcachofa se reproduce por semilla, que se usa poco, pues mejor se utilizan los hijuelos ó renuevos que nacen al pie de la planta. La tierra debe ser franca, fértil y de mucho fondo. Se hacen hoyos á un metro de distancia unos de otros, y en ellos se hunden los hijuelos, colocando uno ó dos en cada hoyo, y si los dos prenden se arranca el más débil. El cultivo de la alcachofa difiere del délas otras hortalizas, porque necesita estar bañada por los rayos solares, en tanto que sus raíces necesitan mucha agua. Es planta delicada en el invierno y hay que resguardarla en esta estación. La alcachofa fructifica tres años, y al cabo de este tiempo hay que sacarla y sustituirla por nuevos hijuelos. •I * — Alcaparra ( Capparis spinosa de la familia de las Caparídeas). El alcaparro es silvestre en muchos lugares de Europa, pero aun como arbustillo de ornato, de 1 á 2 me- tros de alto, debiera cultivarse en las huertas, tanto más cuanto que á los seis da fruto abundante y puede durar un siglo. CULTIVOS ESPECIALES DE LEGUMBRES. iCo La tierra debe ser ligera, fértil, con un lecho de guijarros. Exposición cerca de los muros del norte. Poco riego, pero en el invierno hay que cubrir el pie de la planta con sacate. Se multiplica por semilla, por estaca, por retoños y por acodo. Este último es el procedimiento más usado. El botón ó alcaparra se recoge antes de que se abra y se guarda para ponerse en vinagre. Si se deja fructificar, el fruto es el alcaparrón que se prepara lo mismo. En el comercio hay 7 clases de alcaparras según el ta- maño. 4° Plantas que se cultivan por sus frutos 320 . — En el país, el frijol y el chile ancho que es el de más consumo, pertenecen á los grandes cultivos, como el trigo, el maíz, la cebada, etc. 331 . — La berenjena (Solamun Melongena), el gitomate ( Lycopei'sicum esculenlum ) y algunos capsicos ( Capsicum cerasi forme, C. grossum. C. longum, C. violacmm) se cul- tivan en el mismo cuadro, separando solamente las especies. Se siembran en semillero de cama caliente ó en cajoneras bien abrigadas, y cuando las plañidas tienen cinco ó seis hojas, se trasplantan de asiento, colocando los pies en hileras, al tresbolillo y á SO ó 60 centímetros unas de otras. Estas plantas aman un suelo fértil y riegos abundantes, sobre lodo en la estación de los fuertes calores. La semilla se recoge dejando madurar algunos frutos que se recogen y se secan bien sus granos antes de guardarlos. La berenjena se usa en muchas preparaciones de mesa, el gitomate, para hacer salsas y los cúpricos se preparan de diversos modos, pero su uso más general es como salsa esti- mulante. 333 . — Mostaza. De esta planta se cultivan dos varie- dades, la mostaza negra ( Sinapis nigra) cuyas hojas tiernas se usan para adorno de las ensaladas, y la mostaza blanca {sinapis alba) cuya simiente se emplea para preparar un estimulante muy conocido, pero que difiere según su proce- dencia ; la mostaza francesayla mostaza inglesa: esta última es únicamente la mostaza natural y pulverizada. 166 NOCIONES DE BOTÁNICA. La mostacera se siembra en surcos, en terreno ligero y bien mullido; se cúbrela semilla con una capa muy delgada de polvo de mantillo ó tierra ligera. 333 . — Pepinos ( Cucumis salivus), melones ( Cucumis meló , calabazas [Cucúrbita pepo). Estas plantas se cultivan en terreno fresco, bien ventilado y con riegos abundantes. Los cornichones son los pepinos tiernos, pequeños que se cortan para ponerlos á adobar en vinagre. 334 . — Berros. Los berros son muy estimados en algu- nas localidades y su cultivo debiera extenderse á todas las huertas que tengan agua suficiente, pues el berro además de servir para preparar una buena ensalada, es muy lítil en la alimentación de Jos tísicos. Yo los prescribo con frecuencia á los enfermos de pecho. El berro se siembra á la orilla de las corrientes naturales o al borde de los manantiales y allí se multiplican con pro- fusión. También se puede formar un berrizal , en un sitio muy húmedo ó donde se puede regar abundantemente. Se siem- bran las semillas ó se plantan los pies de berro á unos 15 cen- tímetros unos de otros. Aunque es planta vivaz, conviene reponer los pies anualmente, sacando los viejos del berrizal, con todo y raíz. 5 o Plantas que se cultivan por sus bulbos 3 2 5 . — Ajo AUium sativum), cebolla ( allium cepa) son plantas que se cultivan para aprovechar los bulbos. El ajo no exige grandes cuidados. Se multiplican por los dientes exteriores que se separan de las cabezas y se entie- rran en surcos ordinarios, formando tres líneas en cada surco y á 30 centímetros de distancia un diente de otro. La cebolla ofrece muchas variedades en cada localidad. La cebolla se siembra de asiento en los climas fríos, pero en los cálidos se siembra primero en semillero y luego de crecidas se trasplantan. Los cuidados de estas plantas son los comunes. Los bulbos se recogen antes que florezcan las plantas. El ajo y la cebolla se usan para condimentarlos guisos. CULTIVOS ESPECULES DE LEGUMBRES. 167 6 o Plantas útiles por sus propiedades medicinales 3««. — En los cultivos de hortaliza como estableciendo una graduación natural entre las plantas comestibles y las de propiedades medicinales, se pueden introducir algunas plantas cuyos productos pueden venderse en las farmacias ó á los herboristas ambulantes. Además muchas plantas sirven de ornato en la huerta. _ ... Indicaremos las principales, cuyo cultivo es el ordinario a todas las plantas. Malva (Alt/iea officinalis). Se usan las raíces, las hojas y las llores como emolientes. Consuelda ( Symphytum officinak). Tiene llores rojas, amarillas ó blancas muy bonitas. Se úsala raíz como emo- liente. . . . Violeta ( Viola odorata). Pertenece al cultivo ornamental. Se usan las flores y las hojas como expectorante, en las bron- quitis catarrales. Parielaria (Parielaria officinalis''. Se usa toda la planta como diurético. Borraja (Borra go officinalis). Las hojas y las flores secas como sudoríficas. Cáñamo ( Canabis indica). Las semillas en el catarro ve-. SICíll • Orozuz ( Glycyrrhiza glabra). La raíz como expectorante. Pastillas de orozuz muy usadas para la los. Yerba buena (Mentka piperita). Se usa toda la planta como antiespasmódico. Valeriana ( Valeriana officinalis). Se usa en enemas y en tintura para fricciones como antiespasmódico. Azafrán (Crocus salivvs). Cultivo ornamental. Se usan los estigmas en muchas preparaciones farmacéuticas. Salvia (Salvia officinalis). Las hojas y las flores como estimulantes aromáticos. Romero (Rosmarinus officinalis). Flores, como estimu- lantes. Alhucema (Lavandula spica). La tintura como estimu- lante y tónica. 168 NOCIONES DE BOTÁNICA. Melisa (Melissa officinalis). Flores y Iiojas como estimu- lante aromático. Ajenjo ( Artemisia Absinlhium). Hojas y flores como aperitivo. Con esta planta se prepara el vino de ajenjo, que se toma con agua. Manzanilla ( Anthemis nobilis). Las flores como estimu- lantes y digestivas. Achicoria (Cichorium inli/bus) . La raíz como depurativo. Lúpulo {Hurnulus lupulus) . Los conos florales como depu- rativos. Las hojas sirven para la preparación de la cerveza. L1 rábano silvestre ( Cochlearia armoracea), el berro y la codearía {Coc Idearía officinalis) se usan como antiescor- búticos, del primero la raíz, del segundo toda la planta y de la tercera las hojas. J Ill cmo ó higuerilla (, Ricinus communis). De las semillas se extrae el aceite de ricino purgante. nil /"y ;o feniculum ). Toda la planta como esti- uuianle, sudorífico y eslomáquico. Conandro ( Coriandrum sativum). Las semillas lo mismo que el hinojo. ' ’ Angélica ( Angélica archangelica). La raíz y las hoias lo mismo que el hinojo y el coriaudro. J JdS J ° conlm liíZuSÍdader'^' ^ SemÍllaS ’ C ° m ° eslomacales cnfcdaár^- La ^ COm ° dÍUréÜC0 ’ en Ias Se*h -iro n n CL [ 1 "' ¡ nariümn ) ■ Los bulbos como expectorantes. j una tintura usada en el reumatismo. mu h °Warrubium vulgare). Hojas y flores como esti- por el y u]go Unl0 C ° n la manzanilla se usa ' en la intermitente mieiito { Pa P aw - r somn Íferum). Las cabezas en coci- madur a r en 7^ ° S ° ld ° S í nflamados - Dl ‘ cabezas bien opio hacienda 6 mo . ment ° de caei ' los pétalos, se extrae el la co’r e, , "? ,™ a 1DCIS10n COn una nava Í a sólo corten al ai ‘ ¿ P° r las cuaIes sala mi jugo lechoso que se espesa las incisione °° 6 P ° r as lardes y p° r las mañanas se hacen ncisiones, mientras dure la florescencia del plantío. IGO CULTIVOS ESI’ HUIALES DE LEGUMBRES. 32?. — Volvemos á llamarla atención sobre la necesidad de conocer el nombre latino de las plantas para no confun- dirlas con otras que no tienen las mismas propiedades y aun pueden exigir distinto cultivo. Así por ejemplo, la malva ó altea oficinal ( Althea offici- nalis) es planta de propiedades medicinales bien conocidas. Pero al género Altbea pertenecen muchas especies de cultivo ornamental por la belleza de sus llores : Ah hra rosea, llamada Rosa de Damas, originaria de Syria, es arbusto de 3 metros de alto, con flores grandes, semillas * variando del blanco nieve al amarillo naranja, y del carmesí oscuro al negro. Las variedades se propagan por el injerto en hendidura sencillo. Se multiplica por semilla en tierra franca y ligera. Trianual. Althea sinensis, Malva China, bisanual, con flores sencillas ó dobles, disciplinadas blanco y púrpura. Hay una variedad de flores rojas. Se siembra en cama caliente. Althea frutcx, variedad del Hibiscus Sijriacus, Malvavisco de los jardines ó Kesmia mosquela. La variedad de flores blancas es muy delicada. Se siembra en tierra ligera y con exposición al mediodía. Otro ejemplo. La violeta ( Viola odorala ), usada como ex- pectorante, se distingue de la : Viola comida (violeta de cuernos). Originaria de los Piri- neos, tiene flores azules ó de un violado malva claro, con un espolón largo y en forma de gancho. Tiene las variedades : viola comida alba de flores blancas, viola comida lútea de flores amarillas. Viola calcarata, violeta de espolón. Flores grandes viole- tas ó amarillas, con espolón. Viola Altaica. Violeta de Altai, á la cual refieren algunos el Pensamiento y todas sus variedades. Viola tricolor. Pensamiento. Viola palmensis. Violeta de Palma. Arbusto, con flores azul claro. Tierra ligera, y poco riego en su cultivo. Viola biflora, violeta de flores amarillas. Viola grandiflora, violeta de flores blancas. Viola rothomagensis, violeta de flores azulejas. Viola cucullata, violeta de flores azules. ■170 NOCIONES DE BOTÁNICA. Estos ejemplos bastarán para demostrar la conveniencia de distinguir las plantas por sus nombres latinos. ¿Y cuán necesaria no es esta distinción cuando hay que distinguir en el mismo género las especies venenosas de las que no lo son? Los hongos son el mejor ejemplo. Cuestionario. 310. ¿Cómo se clasifican las plantas para su cultivo ? — 311. ¿Cómo se cultiva la chirivia? — 312. ¿Cómo se cultiva ol salsifí? — 313. ¿Cómo se cultiva la escorzonera? — 314. ¿Cómo se cultiva el nabo? — 315. ¿Qué hay que decir sobre el cultivo de las coles? — 316. ¿ Y sobre el de la lechuga? — 317. ¿Qué hay que decir sobre la acelga, el apio, el cardo y la espinaca? — 318. ¿Qué hay que decirsohrc la alcachofa? — . 319. ¿Y' sobre la alcaparra? — 320. ¿Á qué cultivo pertenecen el frijol y el chile ancho? — 321. ¿Cómo se cultiva la berenjena? — 322. ¿Cómo se cultiva la mos- taza ? — 323. ¿Cómo se cultivan los pepinos, los melones y las calaba- zas? — 324. ¿Cómo se cultivan los berros? — 323. ¿Cómo se cultivan el ajo v la cebolla? — 326. ¿Qué plantas son útiles por sus propiedades me- dicinales? — 327. ¿ Qué importancia tiene el conocimiento del nombre técnico de las plantas? CUARTA PARTE JARDINERÍA CAPÍTULO DECIMOSEXTO ¡jgs. Si el cultivo de las plantas alimenticias es el re- sultado de la necesidad de sostener la vida variando los medios de nutrición ; si el cultivo de las plantas útiles ha sido el producto de las necesidades de la industria que co- mienza por vestir al hombre y acaba por rodearlo de lujo y comodidades, el cultivo de las flores ha sido el sello carac- terístico de que la familia humana sale de la rusticidad natural y entra en pleno periodo de civilización. Las flores son el ornato de la naturaleza y la mujer ama todo lo que es bello y delicado ; por eso es la que más se ha dedicado al cultivo cíe la flores. Desde el tiesto que coloca en su ventana, la enredadera que cubre la puerta de la hu- milde choza hasta el jardín doméstico cubierto de plantas delicadas que recrean la vista, en todo se descubre la mano de la mujer. Por eso va consagrada especialmente al bello sexo este última parte de la obra. Los jardines más célebres son los orientales, pero en ellos domina la línea recta, la simetría, en tanto que en os jar- dines modernos dominan las líneas curvas, la irregularidad, ñero no obstante hay armonía en las tintas de las flores, contraste en los matices, elegancia en la distribución, be- lleza en el conjunto. . ... La jardinería es un arle que requiere gusto estético y conocimiento en botánica y el cultivo de las plantas. Quien carezca de estos dos factores nunca podra formar un jaidin Desde las plantas que se cultivan en los corredores de las 171 172 NOCIONES DE BOTÁNICA, casas, hasta los jardines domésticos más grandes se nota siempre en ellos el gusto de quien los cuida. No se forma un jardín con una aglomeración de macetas con variedad de plantas, sino con unas cuantas, que bien escogidas y cuida- das, aunque sean muy' comunes ofrezcan un agradable golpe de vista. Es imposible dar reglas para la formación de un jardín, pues quien tenga necesidad de hacerlo debe -antes fijarse en los buenos modelos de jardines notables y su sola vista enseña más que un tratado de jardinería. Sin embargo, entraremos en algunos detalles sobre los elementos constitutivos de un jardín, pues que ellos nos ayudarán á extendernos más sobre los cultivos especiales de muchas plantas. 389 ‘ ~ En el jardín pequeño el gusto consiste en elegir puntos de vista que dominen el conjunto, colocando en el cen ro los arbustos y en el contorno la hierbas y procurando que Ja floración de las plantas sea alterna, es decir, que al emanar unas comiencen otras para que nunca fallen flores re™ la VÍSla ' Se P ueden fo ™ar grupos imitando f j .s, romo en contorno de una hermosa planta de gran olaje, el rejalgar, se coloca una hilera de alcatraces, p an a de menos talla, y éstos circundados por macelilns pe- queñas con sacates de adorno de color más claro siempre que e verde del rejalgar y el alcatraz. sao. — Las palmas enanas, las latanias, los áloes, todas las plantas bulbosas como jacintos, lirios, tulipanes, crocus, narcisos, etc., contrastando con los rosales, las dalilias, las crisantemas, pueden ayudar á formar hermosos grupos en un jardín pequeño. Todo el secreto consiste en adaptar el tamaño de las plantas á la magnitud del jardín de modo que Ja vista pueda dominar el conjunto. Este precepto es aplicable, lo mismo al jardín en minia- ura que al jardín público de proporciones más ó menos grandes. sai ei parterre es un jardín pequeño, que puede do- minarlo la vista para apreciar todos su detalles, y en un gran jai ni es á su vez solo un ornato especial que lleva ese nombre. El parterre debe ser un cuadro en miniatura que 173 JARDINERÍA. imite en sus detalles á la naturaleza misma en aquellos puntos en donde lia prodigado todas sus galas por el con- traste, toda su riqueza en colorido, toda su belleza por la uniformidad del conjunto en medio de la variedad de los detalles. La monotonía del césped lo interrumpen variados obstáculos muy agradables á la vista. Aquí un pequeño macizo formado por caprichoso cactus ( Eckinocactus , Ollo- nis , Eckinocactus Grusonni , Echinopsis ozigona, Anhalo- nium prismalicum y otros); más allá un plátano se levanta majestuoso sobre su colina de verdura; en otro punto va- rios macizos con plantas bulbosas (unos con ranúnculos de varios colores, otro con anémonas, otro con crocus, ó jacin- tos, ó tulipanes) más allá un macizo mosaico de plantas de follaje en donde el campo oscuro de los rebalgares, ó los arums, ó las begonias de hoja verde subido está bordado por el follaje bronceado de los acalipha, ó el blanco de la cine- raria, otro macizo destaca los plumeros de las eulalias (eu- lalia japónica, eulalia listada, eulalia zebra dorada) bordado por fuñidas de hojas anchas. En otro punto del parterre, las grutas artificiales formadas por grandes peñascos sobre los cuales se extiende una poca de tierra y arena que se cubre de plantas vivaces que exijan poco riego ó no exijan ninguno proporcionándolas la familias de las gramíneas, amaril ideas y cácteas. También se puede sembrar en con- torno de las grutas plantas trepadoras, poniéndoles una armazón de ramas secas para que se enreden y cubran la mole de los peñascos. Un cenador rústico sobre el cual se enredan los rosales sarmentosos, la vid trepadora, las pasio- narias, chícharos de olor, yedras, coccíneas, clemátides, begonias, según el gusto y lo requiera la situación de los kioskos. Una pequeña colina, con su sendero de 0 m ,50 de ancho, en forma de laberinto, bordado por flores varias ó de un solo género pero muy rico en variedades de colores bien combinados como por ejemplo, dahlias liliputienses de flores dobles, comenzando por color blanco (Dahlia Wilkelm Neuman), luego lilas (D. Mabel, D. Alvina) en seguida rosa con reflejos lilas (D. Emilio llepke) terminando con rojo aurora (D. Canciller Bismark) y rojo púrpura (D. Carlos Huber) : en el centro del laberinto se destaca una esbelta y m nociones de botánica. majestuosa araucaria. Si hubiere un muro se puede formar un invernadero muy hermoso con dos ó tres pies de Rugau- vilia, á cinco ó seis metros de distancia del muro y for- mando un alambrado muy fuerte y bastante alto para que se desarrollen las plantas. Si quisiéramos entrar en muchos detalles sobre la deco- ración floral del parterre no bastarían 30U hojas de texto, así pues nos limitamos á lo expuesto para que se vayan formando idea los aficionados á este género de ornamen- tación en el parterre. 3 3 t» — En el parterre lo que más importa es su alfom- bra. La tierra será la franca, bien mullida y poco abonada para que no sea demasiado fuerte. En ella se siembra el pasto que es lo que forma el césped del parterre. El ray-grass ( Lulium perenne ) se siembra tupido para que forme un cés- ped muy compacto. 333 . — También se usan mezclas de semillas para cés- ped y esa composición varía con la naturaleza del suelo. Si es tierra fuerte, fresca y permeable, se puede usar la mezcla siguiente, en la proporción de 1UI) kilos por hectárea: Ray-grass ( Lolium perenne), 50 kilos de semilla. Poa de prado (Poá pratensis), 9 » » Roa común (Poa trivialis\, 1 » » Grama de olor ( Anthoxalhum odoratum), 10 kilos de se- milla. Agrostide cundidora (Agroslis slolonifera), 5 » Trébol blanco ( Trifolium repetís ), 1 o Trébol violeta [Trifolium pratense), 1 » Ray-grass de Italia [Lolium ila/icum), 3 » Cañuela pequeña [Festuca tenui folia), 10 » Cinosura de crestas [Cínosurus crislalus), 10 » Para un terreno árido, que se riegue poco, pero bien mu- llido, se usa la mezcla siguiente : Ray-grass inglés 4 0 kilos. Ray-grass de Italia 10 » Cañuela roja o » " de ovejas o » 175 JARDINERÍA. Cañuela de hoja pequeña ... 5 kilos. Bromo de los prados 5 » Avena amarilla 5 ,, Grama de olor 10 „ Poa de prado 10 » Poa nomoral 5 >, 3 ,'ía. Los céspedes se riegan con mucha frecuencia y se recortan para que su superficie se vea siempre uniforme. Los puntos que se aclaran, se siembran de nuevo. .i.s.n. Las calles y senderos del parterre, serán de un ancho proporcionado al tamaño del jardín. El sendero no seta menor de SO centímetros, y la calle más angosta debe permitir que dos personas puedan circular por ella estando una al lado de la otra. Si el parterre es espacioso pueden tener tres, cuatro, cinco metros cuando más, pues ya diji- mos que el parterre puede formar por sí solo el jardín ó ser un detalle de éste. •£.£*». Las calles y senderos se cubren siempre de aiena un poco gruesa, pero no demasiado, lo mejor es mezclar arena con polvo de ladrillo en las calles y con' polvo < e cantera en los senderos, dando un hermoso contraste el color amarillo rojizo de las unas con el color pardo blan- quecino de los otros, pues el verde de los bordes destaca mejor. •ere?. Los cordones se hacen con ladrillos enterrados l ista la mitad, ó bien con varas formando arcos levantados unos 20 centímetros é imitando el contorno de un canas- tillo. Si los macizos están aislados se les pone cordón para que imiten un cesto: en caso de que se levanten sobre el césped no es necesario el cordón. Los cordones vivos se hacen con plantas. En muchas localidades de la República se usan los lirios limi- ■uu o las calles de los jardines. El mejor cordón vivo es el COmun que se P'anla por hijuelos arraizados á diez cen- ímelros de distancia cada uno; cuando ha crecido se corta con tijeras á una altura de lo á 20 centímetros. titta. - Las plantas que por su cultivo delicado no deban • setu )l,use cu tierra, se cultivan en macetas ó en cajones y 176 NOCIONES DE BOTÁNICA. éstas se colocan enlre el follaje de los cordones ó se entie- rran en los macizos. También se forman graderías pequeñas de dos ó tres tra- mos de figura circular ú ovalada, sobre las cuales se aco- modan las macetas con plantas delicadas. 3 — Las fuentes, bojas ó de cantería, las columnas con jarrones, las estatuas, son otros tantos adornos del par- terre. 341 . — Emparrados y setos. En nuestros climas cálidos es muy conveniente y aun necesario, formar en los jardines calles cubiertas, pabellones de descanso, con emparrados que á la vez que son agradables á la vista son útiles por sus frutos. Se colocan postes de trecho en trecho con travesa- ños de madera y se eligen especies vigorosas de espeso fo- llaje y de fruto exquisito, que se plantan cerca de los postes y se va formando con sus ramas una conlraespaldera de cada lado de la calle. Los setos se forman con plantas enanas, rústicas, de follaje agradable y flores hermosas. Aragó reco- mienda para los setos, el Membrillero del Japón ( Chano - metes umbilicata ) y el Citruo triplera, que se reproducen por simiente, ó por estacas de raíces. 3*2- — Los Macizos son pequeñas elevaciones de tierra de forma redonda ú ovalada, formando declive para que Fig. 116. — Macizo de geranio Vulcano en el centro y geranio de M n# Salloray. tenga vista el conjunto de las flores. Las reglas principales para formar los macizos se reducen á las siguientes : 1* Formar masas de follaje de matices claros y oscuros, JARDINERÍA. (77 pero es preciso elegir plantas de hojas anchas y de colores luerles. a-Bíí — Un hermoso macizo de follaje se puede formar con caladlos, Wigandia, brezos {Erica acoparía, E Arbó- rea), ele. 2 Los macizos de (lores pueden formarse con plantas de una misma especie que crezcan á la misma altura, ó bien de arias especies del mismo género, procurando que las flores mas oscuras ocupen el centro y las más claras el contorno. 3 Los macizos con plantas de diversas especies ocupa- 2S7 478 NOCIONES DE BOTÁNICA, rán las de colores más oscuros el centro y las más claras la circunferencia. Si son plantas de diverso tamaño, las mas grandes ocuparán el centro. 3 _ 4 4 . — Ejemplos. Un macizo de geranios muy hermoso se forma con plantas de geranio Vulcano en el centro y geranio de M mo Salleray en el contorno. El primero tiene ñores rojas con rellejos purpurinos y el segundo es enano y el follaje está bordado de blanco {fig. 116). 345. — Un macizo de dahlias, cactus, variedades ama- rillas, ó blancas en el centro, y rojas las del contorno es de un bellísimo efecto. 34G. — Un macizo de cactus [fig- 117) de forma ondulada Fig. 118. — Piloccrcus scnilis. Fig. 119. — MamiUaria mncromcris. llevará en el centro A el Piloccrcus scnilis [fig. 118) en las ondas más grandes B, el Alamitaria macromeris [fig. 119) y en las más pe- queñas G, el Mamilaria micromcris {fig. 120). si?. — Un macizo do Cannas de gran follaje, con caima, florífera y caima Bihorelli, ó bien con cannas de llores, como canna Almirante Courbel, 11. amarillo cromo, y canna Miss Sabrá Hill, fl. carmín amaranto. Por último un macizo con salvia en el centro y thlaspi en el contorno es de un bello efecLo. Fi 0- . 120. — MamiUaria ° viicromeris. JARDINERÍA. ;s s$. - y exigen tura para - Los macizos ornamentales son más complicados mucho gusto y vastos conocimientos en üorieul- arreglarlos. Pig. 121. - Macizo formado con plantas do follaje. Macizo de ornato matizado. La figura 121 representa el plano de un macizo formado con plantas de follaje ornamental : 1 . Co/em Verse ha /fdli. ■ 180 NOCIONES DE BOTÁNICA. F!g. 122. — Phwnix reclínala. 2. C o leus Blumei. 3. Gnafalium la - naliun. 4. Állevnauthevci spalulula. o. Altcrnantherci amaina. :b* 55. — Constituyen un elegante adorno en los parterres, puestas en macetones sobre columnas, ó sim- plemente en macetas ó barriles en los jardines domésticos, muchas plantas llamadas de invernadero, que en los climas fríos y en el invierno en los cálidos, necesitan abrigo, pero que muchas de ellas, una vez naturalizadas prosperan bien en cualquier exposición en los climas JARDINERÍA. 181 templados especialmente. Se cuentan entre estas plantas de Fig. 124. — Latania Borbónica Fig. 125. — Pandanus utilis. ornato los Phcenix reclínala [fia. 122), los Dmecena indiviso 182 NOCIONES DE BOTÁNICA. (ftq. 1 23), los Latania Borbónica (/ig. 124), y los Pandanus ulitis (/ig. 125). ;ss«». — También luiy que hacer mención, como elemento de ornato páralos parterres y jardines, de las jardineras y los canastillos. Estos muebles se construyen comunmente do alambre do fierro' trenzado poro pueden hacerse también con sarmientos de vid ó con varas de membrillo. Se les da la forma de un canastillo ó un cajón cuadraugular y se sientan sobre un tri pió de madera ó de fierro. Se cubren los costados con musgo y se llena el Fondo con tierra de huerto y encima tierra de encino. En estos canas- tillos se cultivan plantas pequeñas á Formar un ramillete natural, un verdadero jardín en miniatura. Se pueden sembrar con las semillas que se quiera ó se colocan unas al lado de las otras macetilas pequeñas con las plantas ya crecidas y se ocultan los bordes con tierra de encino que se echa por encima. Las jardineras más cómodas llevan rodadillos en los pies para transpostarlas donde se quiera. Es preciso construir varias jardineras para tener llores en todas las estaciones. «si. — Las plantas crasas se colocan en sus macetas, y se cultivan especialmente : el cactus opunlia, el mezemliri- antema, el equinocaclus, los áloes, los ficoides, los eslepe- lias, y los sedum ó chismes que se colocan en jardineras colgantes. Estas plantas se cultivan en tierra de huerto con poca tierra de encino, y se riegan sólo tres veces á la semana en el eslío y en el invierno sólo cuando se vea muy seca la tierra. ;s,V3. — Las principales plantas para jardín, que se cul- tivan en tierra de encino son las siguientes : Ar/apanihus umbclatm (agapanlo), vivaz 1 . Aloe ara'chnoidcs (áloe tela de araña) ^ ; » frulicosa (áloe cuerno de carnero) » » tingua (áloe lengua de galo) » 1. En jardinería se emplean los signos siguientes : 0 quiere ileeir anual, planta (pie dura un año; Q 1 bisanual, que dura 2 años; vivaz, muchos años de vida ; (5 'tai 131 ' 6 decir arbusto de consistencia leñosa. JARDINERIA.. 183 Aloe margar ilifera 'jf » socotrina » '•/ variegala » AmavgUs farinosísima (amarilis de llor en cruz), » » regina (amarilis de la reina) » Azalea, T) ; Begonia , ; Cactus cchino cactus silicatos, 9í Cactus epipbilum, fb ; Cactus cpiphilum speciosum, id.; Cactus flageli formis, id.; Cactus speciosinnts, id; Calceola- rias, 2í ; Calla ÜEthiopica (pie de vaca), id; Cinerarias, id.; Crassula coccínea, id.; Crassula lucida, id.; Daphnes, id.; Epacris, id.; Euphorbia splcndens, id.; Ficus elástica, id.; E/cus repetís, id.; Fuchsias , id.; Gladiolus, id.; Gloxi- nias, id.; Hortensias, id.; Kalmialati folia, id.; Liliutn, id.; Magnolia grandiflora, id.; Mcsembriantcmum aareum, cons- picuum, cristallinum, detoides (varios íiooides), id.; Mimosa púdica, id.; Nerium olealtdcr (laurel rosa), id.; Polyanthes tuberosa, id. ; Prímula sinensis, id. ; Púnica granalum, id.; Jlkododendum, Rosales, Tulipa gesneriunu, Viola tricolor (pensamiento). Cuestionario. 328. ¡. Qué es necesario para construir un jardín ornamental ? — 329. ¿ Cómo se forma un jardín ? — 330. ¿ Cómo se le da vista agradable á un jardín en su conjunto? — 331. ¿Qué es el parterre? — 332. ¿ Qué es la alfombra del parterre? — 333. ¿Cómo se forman las mezclas de semillas para el césped? — 334. ¿Cómo se cuidan los céspedes? — 33o. ¿Cómo se forman las calles y los senderos? — 330. ¿Cómo se adornan las calles y senderos? — 331. ¿Cómo se forman los cordones? — 338. ¿Qué son cor- dones vivos? — 339. ¿Cómo se cultivan las plantas delicadas? — 340. ¿Qué otros adornos lia y en el parterre? — 341. ¿ Cómo so forman los emparrados y los setos? — 342. ¿Qué son macizos? — 343. ¿Cómo se forma un ma- cizo de follaje? — 344. ¿Cómo se forma un macizo de geranios? — 343. ¿Cómo se forma un macizo de dablias? — 346. ¿Cómo se forma un macizo de cactus? — 347. ¿Cómo se forma un macizo de Caimas? — 34S. ¿Cómo se forman los macizos ornamentales? — 349. ¿Qué son plantas ornamentales de invernadero? — 330. ¿Cóma se forman las jardineras y los canastillos? — ■ 331. ¿Qué son plantas crasas? — 332. ¿Cuáles son las principales plantas para el cultivo en uu jardín pequeño. 184 NOCIONES DE BOTANICA. CAPÍTULO DECIMOSÉPTIMO Cultivos especiales de algunas flores 353. — Sería empresa difícil el tratar de indicar los cul- tivos aun de una pequeña parle do las especies cultivadas en los jardines. El solo índice con los nombres de las especies llenaría algunos tomos. Baste saber que los rosales cuentan sus variedades por miles y la mayoría de las (lores más comunes en los jardines llegan á centenares sus variedades. Nuestro objeto al redactar un libro elemental de jardinería práctica, es iniciar, á las niñas especialmente, en los se- cretos del cultivo, despertarles el gusto estético para que se inclinen á arreglar sus jardineras ó cuando menos algunas plantitas en maceta, y estimularlas para que se enseñen á observar y estudiar la naturaleza misma. Las escuelas que tengan su jardín botánico pueden dis- tribuir por series los cultivos de flores entre las niñas y de esle modo se practica á la vez que se estudia este curso. Cultivos de plantas de cebolla, bulbo ó tubérculo, I'ABA JARDINES Ó VENTANAS 354 . _ El cultivo de los Jacintos, Tulipanes, Crocus, Narcisos y Scilas es el mismo para todas sus especies. Se prepara una tierra especial para cultivar estas plantas en maceta. Se mezclan por terceras parles tierra de jardín muy grasa y Fibrosa, estiércol de vaca ó boñiga seca y vieja, arena seca con algunos puñados de hojas secas molidas. Se amontona la mezcla, se humedece y se deja en reposo un mes. J_,as macetas no deben ser muy grandes, de 0 m ,20 á 0"\2f> de altura a lo más. La cebolla debe estar cubierta por la tierra, y ésta no hade estar muy húmeda aunque sí suelta. Las macetitas se enlierran en cajones y se les recubre con una capa de tierra de 0 m ,i0 de altura. Á las seis sema- nas se sacan las macetas y se colocan bajo abrigos, cajones CULTIVOS ESPECIALES DE ALGUNAS FLORES. 18Ü con cubierta transparente y poco tiempo después se les coloca al aire libre en sitio bien iluminado. Para cultivarlos en el suelo se eligen las variedades lili- putienses y de colores muy vivos. La tierra ba de ser ligera y fértil, bien mullida á 0 m ,60 de profundidad. Guando el suelo es muy compacto se le pone arena al voltearlo. Las cebollas se entierran á una profundidad de 0 m ,t0 á O'Vlo y á O'Vlo de distancia unas de otras. 333. — Entre las principales variedades de jacintos indi- caremos las siguientes : Jacintos dobles. — Azules : Garlos Dickens, Corona de las indias, Gloria florea, la bien amada, Murillo, Otelo, Tu- balcain. — Rojos y rosas : Betsy, Czar Nicolás, Goethe, Josefina, Luis Napoleón, Millón, Reina Victoria, Rex ru- brorum. — Blancos : Ana María, Heroína, la Diosa, Mi- nerva, Venus. — Amarillos : la Favorita, Creso, Heroína, Buquet naranja. — Violeta : Lord Cowley. En los jacintos simples hay también numerosas variedades azules, rojo, rosa, blanco, ama- rillo, púrpura violeta (fig. 126). 35G. — Tulipanes. Arlus Fig. 127. — Tulipán. (escarlata); Brutus (amarillo estriado) ; Duc de Koll (rojo, amarillo, carmesí, dorado listado, rosa, bermellón, blanco); Chisinia (blanco y rojo listado) ; Hercules (doble, cereza); Moliere (doble, púrpura); Silvia (doble, rojo) (fig. 127). Fig. 126. — Jacinto simple. 180 NOCIONES DE BOTÁNICA. :t r, 7 . — Crocus .4 Ibion (azul); Otalo (púrpura); Victoria (blanco), ele.; el Azafrán ( crocus ) se cultiva como planta medicinal ó industrial (fig. 1:28). :sss. — Narcisos simples. Poético (blanco y naranjado); Máximos (amarillo); N. dobles. Albo plano odorado (blanco); Pumila plena (amarillo) ; Po- lyanthus Narcisus. Gloriosa (blanco y rojo) ; Sol brillante (amarillo); Victoria (blanco). íí5S>. — Scilas. Scil/a amaina. S. belgicus (varios colores) ; S. bifolia, S. campamilata, S. pe- ruviana ¡lora alba, S. C cerúlea, S. lútea {/lg. 129]. :s««. — Acanto. Esta planta es decorativa por la be- lleza de sus hojas, de las cuales lomó Calimaco el estilo ó dibujo del Capitel Corinlo. Las (lores son de color blanco rosado ó lila. Se conocen el acanto sin espinas ó alas de 128. — Crocus. ángel, acanto deDalmacia, acanto de Portugal, etc., hay unas catorce especies. Se cultiva en tierra de huerto y se multiplica también por semillas ó por la división en las raíces (/lg. \ 30). — Acoro. Plantas que se utilizan páralos cordones de los jardines de invierno. Exigen tierra húmeda y de en- CULTIVOS ESPECIALES DE ALGUNAS PLORES. 187 cilio. So cullivan las variedades, Acorus gramineus, cuyas ltojas lisiadas de blanco y rosa en fondo verde son de un electo muy hermoso, Acorus lanceolatus, A. miuimus, A. pusillus. Se multiplica por sus rizomas. «<;•». — Ag-apanto. Planta muy hermosa para balcones, t macelones de los jardines ó ventanas. Sus llores azules pare- cidas a las del jacinto forman una umbela sostenida por un escapo muy largo. Tierra de jardín. So conocen el Aga- panlhus umbelatm, A . florealba (de flor blanca) y .4 . pallida. — Ajo dorado (Allium Muly). Planta perenne, con llores en umbela, color amarillo oro. - — -Ajo azul. Con llores azules; son dos plantas utilizadas para bordar los bosquetes de los parterres. También hay las especies, Allium roseum, .4. sliralum, .4. nigrum, que pueden servir para macizos de una sola especie variando el color de las llores como ya se ha dicho. Tierra de jardín ordinaria. !84S4. — Alstromeria, ó lirio de los incas. Lasalstrome- rias son delicadas, pues en los climas fríos y en el invierno siempre necesitan los cuidados del invernadero. Se forman bordes muy vistosos en los jardines y páralos canastillos son muy elegantes. La Alstromeria tricolor, de tres colores, tiene sus hojas de tres colores, rosa brillante, amarillo y verde. Hay las variedades : Alslrcemeria auranliaca, A. aurea, A, brcisi/ensis, A. chilensis, A. /ulna, A. oculata, A. peregrina alba, A. pulchella, A. peregrina rosca, etc. La alsirémera papagayo, A. priüania, es originaria de Méjico, y es la más robusta de estas plantas, pues resiste bien el invierno. A. planiaginea, ó de hojas de llantén, es una va- riedad de la brasileña. Se cultivan en tierra floja y en lugares bien sombreados, enterrándolas profundamente á unos 0“,30 ó 0"',40. «Cs. — Amarilis. Las plantas del género AmarylUs son en lo general muy rústicas, por lo que es fácil propa- garlas en cualquier jardín y á toda exposición. Sus llores son hermosas y sustituyen á los lirios en su cullivo (fig. 131). Las principales especies son : Amaryllis Athamaseo (ó de Virginia), A. belladona major, A. belladona rninor, A. Clco- patra, A. longi folia alba, A. longifolia rosca, A. formosi- ssinia, etc. }g8 NOCIONES DE BOTÁNICA. La A. belladona no se confundirá con la belladona , plañía herbácea, venenosa (Atropa belladona). Esta es una varie- dad de A. fonnosis.vma ó Amacayo de México, llamado también lirio de San Jaime, que tiene flores rojas purpu- ' riñas. La .4. sarmicnsis, ó Lirio de Guornesey, tiene llores en forma de lirio color carmín ó rosa y cada tallo lleva de 0 m ,l2 á O" 1 , 20 en su extremo. Los bulbos de esta planta sólo deben quitarse cada tres años y prospera Ilion en cual- quier terreno pues es muy rústica. «<»«. — Azucenas. Las azucenas son flores muy bellas y elegantes para adorno de los jardines. Las blancas (fig. 132) son muy estimadas por el color y la gallardía de toda la planta. En general son plantas bastante rusticas que viven bien en el suelo ó en macetas, cultivadas en tierra ordinaria de jardín y á toda exposición. Algunas como la Azucena gigante de la India exige tierra fresca, porosa y fuerte, resguardarse del sol y mantenerse constantemente húmeda. Las principales especies de or- nato son : Lili.um auratwn (Azucena dorada, de color blanco listado de oro), /,. bulb i ferum. (A. de color carmesí man- chada de naranjado), L. Chalcedonicum (Azucena de Constanlinopla, color es- carlata subido), L. Croceum (A. ama- rillo pálido con manchas negras), L. Giganteum (A. gigante, blanca), L. Ja- ponicum, L. Eximium, L. Liu-Kiu, L. lalcesima (A. del Japón, notables, blancas), L. Lancifo- lium, álbum , roseum, rubrum (azucena de hojas lanceoladas Fig. 132. — Azucena. CULTIVOS ESPECIALES DE ALGUNAS FLORES. 180 blanca, rosa, roja), L. Pomponium rubrum (carmesí escar- íala), L. Thumbergianum. L. Tígrium, ele. Hay más variedades de azucenas silvestres llamadas Mar- tagón, que son muy hermosas. El L. tigrium pertenece á los Martagones, Azucena atigrada ó de China. Hay marta- gones blancos, amarillos, purpurinos y rojos. La azucena amarilla ó común ( Hemerocallis flava) lleva las flores en cormibo, de color amarillo vivo. La Azucena de Lima es la Alslremeria. La Azucena de ¡México es la Amaryllis Regina;. ;SG 2 '. — Yaro. Aro. Alcatraz. Esta planta es muy propia para adorno por sus hojas aflechadas muy grandes y sus llores muy curiosas, pues es sólo una espiga envuelta por una espala muy vistosa en forma de alcatraz, de color blanco ó violeta oscuro ó purpúreo. Son muy rústicas todas las especies, pero en tierra fuerle y mullida se desarrollan con vigor. Hay las especies Arum /Elhiopicunt (Alcatraz de Eliopia), A. Anisarían, A. cornulum, A. corsicum, A. cri- nilum, A. dracunculum , A. ilali- cum, A. maculalum (A. manchado), A. orienlalis, A. lenuifolium, A. serpentaricus. Azafrán. Véase donde hemos hablado de Crocus. »«8. — Begonias. Las bego- nias son plantas de cultivo sencillo y como provienen de los bosques cálidos y húmedos, es fácil prepa- rarles el suelo que les conviene. Como hay begonias de tallo recto, otras de tallo rastrero ó acostado y otras también de enre- dadera se pueden elegir las que se necesiten según el local en donde se van á cultivar [fig. 133). Hay ya begonias tuberculosas para cultivar al aire libre y poder formar macizos con ellas. La tierra que necesitan las begonias tuberculosas se forma con tres parles de tierras de huerto, de eucino y de hojas podridas, en proporciones iguales, agregando á la mezcla una poca de arena blanca. Si se cultivan en el suelo se puede suprimir la tierra de hojas po- Fig. 133. — Begonias. 190 NOCIONES DE DOTÁNICA. tiricias, empleando sólo por mitad la tierra de encino fuerte y tierra de huerto con una huena porción de arena. Se riegan á mañana y larde con poca agua evitando humedecer las hojas. Existen unas 50 variedades de begonias tuberosas dobles : entre las simples las hay blancas, rosas, amarridas y rojas. Las begonias son las plantas que resisten mejor el ambiente impuro de las habitaciones. Todas sus cualidades las hacen apreciables para el cultivo. La begonia encarnada, común en la República, lleva flores encarnadas, en racimo, y sus ramos se prolongan mucho, de modo que pueden cubrir lo que se quiera. La B. de hojas de ricino, es muy vistosa por sus hojas; B. plateada, B. rey, B. con. llores de fuchsia, B. siempre llorida, B. lustrosa, B.gracilis, B ; Porvenir con flores rojo cereza, B. lútea, B. Da- vjs, flores rojo intenso, etc. La B. discolor (de dos colores) es la más rústica de todas, y se multiplica por los ludid- los axilares de las hojas que basta enterrarlos para que broten si la tierra tiene las condiciones de humedad y de calor conveniente. 36». — Buvardia. Este género da plantas muy bonitas p,. -138).' ;tS». — 'Las Guian lints Nivalis llore pleno, G c ra- il i mn iuberoswn , Hcine- rocallis (lava y disliclia; Ida tricolor, viridillora y longiílora; Nerimt cris- pa, ílexuosa, sarniensis; Oxalis arbórea alba, lio— ribunda rósea, japónica, mullillora; Spirctea pa.lma.la, Tropwolinu azureum, edule, tricolor, tnberosinn; [/varia grandiflora, peiToliala; Ze~ •pfa/ranlus ( il/wmascits , cán- dida, carinala, rósea, sullú- rea; Iris (lirio) angélica, germánica, ibérica, pumila, reliculala, tuberosa, etc. (fiy. 139 ), son plantas que pueden elegirse para el cullivo en macetas ó para jardines, ocu- F¡g. 139. — Geranium. pando un lugar preferente las diversa especies de Ranúnculos y Anémonas. Plantas de ornato diversas 381 . — El rosal. El rosal es una planta de ornato en todo jardín. Aun en el jardín doméstico, si 1 al La un rosal, carece de elegancia. El rosal ofrece algunas razas de importancia que breve- mente recorreremos {fig. 140). 383 , — I o Rosales feroces. CULTIVOS ESPECIALES DE ALGUNAS FLORES. 193 Arbustos de I a 2 metros, espinosos, hojas vellosas v caedizas. Llores rosas ó rojas. — Variedades: 1 fosal pero - (rosa erizo) con (lores rosas, Rosal de Kamlchnka con bore¡ púbTicos Sl0S S ° n api ’ opiaclos l )ai ' a macizos en los jardines 2 Rosales involucrados d con brácteas Arbustos frondosos de I á 2 metros, sus llores se distin- guen de las otras especies por las brácteas y por el vello aue cubre los ovarios y el fruto. — Variedades Rosal de los pantanos, Rosal de llo- res con brácteas, que tiene una variedad tre- padora el Rosal María Leouida con flor blan- ca; Rosal microbio enano, de hojas peque- ñas, llores carmín pá- lido; el rosal bracleo- lado y el microbio son muy bellos en espal- dera pero temen el frío del norte y son delica- dos en el invierno. ííS-fi. — Rosales canelas. Arbustos de tamaño variable. Hojas largas y lanceoladas, flores en cormibo de color rosa carmín. — Variedades Ro- sal canela, llores color lila ó carmín pálido. Rosal de Mayo Rosal de Carolina, muy común en los macizos de los jar- dines ingleses. J 585 V Rosales pimpinelas. Arbustos espinosos ó lampiños, llores de color variable — Variedades: Rosal pimpinela, que tiene las variedades Sda lle llores rosas > blanca doblo y amarilla doble; Rosal espinoso, enano, con rosas carmín, amarillentas ó blancas- liosal pompón amarillo; Rosal de los Alpes, que tiene na variedad muy rustica, el Rosal Amadis que sirve para cubrir baje ^. — II o Esta última categoría la caracteriza una sola especie, el Rosal berberifólia ó de hojas de agracejo; es muy rustico, pero tiene llores muy hermosas, amarillas con una mancha purpurina, oscura, en la base de los pétalos. 393. — Los rosales se multiplican por semilla, pero es mas común hacerlo por acodos, por renuevos ó sierpes, por estacas. Casi todos se multiplican por estaca, salvo algunas especies refractarias como el R. de cien hojas, el blanco, los pimpinelas, el amarillo, pero éstos dan muchas sierpes que sirven para multiplicarlos. •89J. Los rosales se cultivan en el suelo, solamente los enanos pueden prosperar en maceta. La tierra, salvo paro, las especies silvestres, ha de ser suelta y abonada, prefiriéndose el estiércol de cuadra algo desvirtuado. .89.», Rara el cultivo en macetas se distinguen los rosales de raíces tiernas, y los rústicos. Páralos primeros se prepara seis meses antes una mezcla de tierra franca, dos p,u Les, una parle de estiércol de cuadra y una parte de man- tillo o tierra vegetal, pero si queda muy compacta la mezcla si le pone arena. Rara los segundos se usan dos parles de tierra arcillosa y una de tierra de encino. Para los muy rústicos hay que agregar fi la tierra un poco de arena de ladrillo poroso. 39«. — Crisantemas. Estas plantas han adquirido una reputación extraordinaria, por la belleza de las llores que se han obtenido por el cultivo y la hibridación. El cultivo es muy fácil, pues se acomodan á toda clase de tierras siempre que no sean muy húmedas. La tierra de jardín con tierra de encino ya desvirtuada un poco les conviene mejor. Se multi- plican por semilla pura, obtener variedades, pero lo mejor es por desgarramiento de la raíz, dividiendo ésta en tres 6 cuatro astillas que se plantan como las estacas j.il). Para obtener plantas muy bellas se suprimen los ramos bajos y se dejan sólo las ramas más vigorosas, de IU á lo, A en cada rama solo se deja el bolón terminal. {98 NOCIONES DE BOTÁNICA. Entre los crisantemas hay las variedades híbridas japo- nesas que son las más hermosas; los crisantemas enanos y los remontantes se acomodan á las condiciones del jardín ó lugar donde se cultiven para que sean vistosos. Las varie- dades más comunes son : Crisantemo de jardín ; C. tricolor; C. rosa; C. iridescente; C. de grandes llores: C. de la India; G. déla Clima; éste es el más bello de los mencio- nados. — Girasol. El gi- rasol es planta rústica, que florece en lodos los suelos, tiene llores muy abiertas, de colores vivos, y sirve para macizos matizados. El girasol de hojas plateadas tiene además hojas de un blanco plateado que hacen resaltar muy bien sus capí- tulos dorales I-i2). Sí*! 1 *. — Clemátides. No hay plantas trepadoras que puedan competir con las clemá- tides tanto por la belleza de sus llores como por su rusticidad, pues son las que resisten los inviernos imis rigurosos {/uj. 1-M). CU l.'l'l VOS ESPECIALES PE A LAUNAS FLORES. 1 Los jardineros dividen Jas clemálides en ?j grupos, según la época de su floración y el lugar en que ésta se lince. 1 er grupo Palcas, florece en ramos del año anterior. — Variedades : Excelsior, flor doble; el Cid, Rellena, Sofía, Slella, Uranos, etc.; 2 0 grupo : Lanuginosa, florece en los ramos del mismo año. — Var. ; Alba magna, Aureliana, Gigantea, Geni, Juana de Arco, Lanuginosa cándida, nivea., etc. ; .'1 er grupo : Jad-maní , florece en los reloños del año. — Var. : Jaokmani superba, alba, Otelo. Neptuno, Star ol India, etc. ; 4 o grupo : Florida, (lores grandes v dobles en ramos del año anterior. — Var. : Aurora, Encan- tadora, Ondina, Proleus, etc.; 5 0 grupo : Vilicella , florece en ramos del mismo año. — Var.: Árabelia, Campanulíllora, Venosa violácea, Iris, Leónidas, Itubens, Rubra grandi- flora , etc. _ Camelias. La Camelia del Japón {Camelia Ja- pónica) lia producido por el cultivo, el clima y la liibrid ación mas de 700 variedades de llores dobles de todos matices, del blanco al rojo. Las camelias son propias para el cultivo en maceta y exigen tierra de encino ó una. mezcla por mitad de tierra arenosa y oirá mitad de tierra negra porosa. Se multiplican por injerto, por pies ó por acodo. Se multiplican por smmbra para obtener nuevas variedades ó patrones para el injerto. _ Carrizo do C/n/o ó Caña do las pampas. Esta, es mm de primer orden para ornato de los jardines y en mareta es de un aspecto magnífico. lhl Y Ggnoriinn argrnteum, que es la Gaña de las pampas, el G. elegans (Carrizo elegante), tí. violaccum (C. de color violáceo, G. giganleum (Carrizo gigante). Son plantas dioicas ; los pies hembras se distinguen de los machos por as panojas más grandes y más extendidas. Bajo una tem- perafuni. media anual de 12 á Id grados, tierra silícea, poco meda, riego abundante en el verano, se desarrollan mag- ■'. u " l ; s Y vigorosas. Se reproducen por simiente ó por di vi- 810,1 (1(; la raíz. . — Claveles. El clavel es una flor que por su 1II,L ’ P°> su belleza y la riqueza de su colorido puede •200 NOCIONES DE BOTÁNICA, rivalizar con la rosa. La moda lia hecho vivir muchas lloros que luego han decaído y al Un han desaparecido de los jar- dines, pero el clavel tiene el privilegio do alegrar la humilde choza del labrador, como recrear con sus llores gallardas los macizos de los parterres más aristocráticos. -!«•;. — El Clavel ó clavellina común ( Dianlhus canjo- phijllus ) ha sufrido por el cultivo, la hibridación y el clima, muchas metamorfosis, que imprimen nuevo atractivo á cada nueva variedad. Los jardineros distinguen tres grupos, que son : 1° Claveles granadinos, cuyo tipo es el clavel rojo ( Dianlhus ruber) ( ftg . 144) que se cultivan para extraer la esencia de clavel; 2" Claveles flamencos; ,‘í° Claveles de fantasía. Los claveles perpetuos cuya floración dura mucho tiempo aun en invierno son muy apreciados por los jar- dineros. Clavel de. poeta, con llo- res pequeñas reunidas en corimbo ; Clavel granadino doble, muy usado en macizos y macetas; Clavel remontante doble lionés con flores dobles enormes; Clavel condesa de París con flores amarillas. Los claveles se cultivan en tierra ordinaria de jardín y se multiplican por siembra ó por acodo. íes. Los Amarantos son plantas muy vistosas tanlo por lo curioso y variado de sus llores como por la riqueza de coloridos. El Amaranto snlici/blins (/i;/, l io) hace un bellísimo con- traste con el amaranto cresta de gallo enano color rojo (i Celosía eristala rubra). 114. — El clavel. CULTIVOS ESPECIALES DE ALGUNAS FLORES. 201 Los amarantos cresta de gallo ordinarios y enanos ofrecen los colores ó variedades blancos; amarillo oro y cobrizo; aurora ; rojos cereza, grosella y carmesí ; rosa y violeta. Los amarantos cola de zorra, salicil'olius y tricolor son plan- tas muy decorativas. — Al lado de los Ro- dodendrón, figuran cu pri- mera línea las azaleas de aire libre, como la azalea de la In- dia, que es una planta estimada tanto por la abundancia de sus llores como por la riqueza del colorido. Los mimulus son plantas anuales ó vivaces, figurando enlrc sus especies de ornato el Mimulus' moschalm (mimu- lus almizclero) cuyas flores exbalan un olor á almizcle muy pronunciado ( fig . 146). 145, — Amaranto cresta do gallo enano. Fig. 140. — Mimulus. Fig. 1-17 . — Reina Margarita. La Reina Margarita ofrece un sinnúmero de variedades 202 NOCIONES DE BOTÁNICA, todas bellas y elegantes muy decorativas tanto para parterre como para tiestos (/ ig . 147). Las caprichosas y vistosas tintas de los caladlos juegan muy bien con los suaves coloridos de la reseda, del thlaspí y del césped del Olimpo (siálico armería). La Tliumbergia y la Verbena, la primavera y la es- puebla, la petunia y la inmortal, el abutilón y la’ peonía, la yedra y el caracol, el chícharo oloroso y la flor de cera, con otras muchas flores que en cada localidad florecen exuberantes y ricas en colorido, forman el cuadro armónico, agradable, de un jardín por pequeño que sea. El secreto consiste en poner cada flor en su lugar; la aglomeración es pesada y quila la vista al conjunto. El primor golpe de vista debe atraer la atención sobre los detalles y cada detalle debe ser una sorpresa agradable. Cuestionario. •TC!. ¿ Para qué hnv necesidad de indicar cuáles son las nrinrinnlcs vnVm \ C nrnal0? ~ 3!ii ■ ¿ Cómo se ni II i van los-jacintns, tulipanes de r S ;,~ 3a3 *, iC,,áIes s °" las Principales _ ■ . I 3:jG ; <■ '.nulos son la variedades más curiosas de tulipanes? i ' 6 • 1 . , son v « r «oüiic1cs más curiosas de crocus? — 358. ; Cuáles ri, princ 'l )aios variedades do narcisos? — 359. ¿Cuáles son las jirin- c , a |e s_ variedades de Scil.is ? - 360. , Qué hay que decir sobre los ácán- • <■ Jim se liona que decir sobre los ácoros? — :|(¡-i • nné i,a | fi e 80 „ . as varied.,i M , „e % d ralo. — 304. - Que bav que decir sobre la alslrnmnrin ? — 3fi:¡ • y \nmr-' A ™.eó '*1 ~ '■ V sol,rc la5 n^mciu^ ? - 3G7. V sobre los _ . ¿ I— <11110 se fililí van las Begonias y cuáles son sus especies? son las especies principales de Uuvardia ? — 3711. ¿Dué J_ ., 7 ^' es „ 1 , c . lle ,a B'isingolcia? — 371. ¿Cómo se cultivan las Camias? 1., Ca " n ! S ,Je y flores? - 373. ¿Cuáles son .j.'.. r n j oso follaje? 374. ¿Cuáles son las de llores bermosas? sohi^osmr^ .?" e l e , CÍr Sobre los orcliis ? — 376. ¿Que hay que decir sob e los Otris? - 377. ¿ Qué especies hay de Daldias? - 378. ¿Qué ■mi' ' "ii ' , ' 1 ^ 10 ^"fli'dos? — 379. ¿Qué espurios bav de ciclameil? — ri'ed’ade de a " l!,S l " , , , '! rnsas h ''y Para ornato? — 3SJ. ¿Cuántas va- • ' i r ¡ . sa es se miltivan? — 3S2. ¿Cuáles son las principales R niníue ' f T es feroccs? - as:i - ¿ Cuáles son las variedades do uu- r í i' t,I OS ’ ~ 384 - i Cuáles son las variedades de II. ranelos? — , 6 ® s S J °" ,as variedades de I!. pimpinelas? — 3S6. ¿Cuáles son as variedades de I!. de cien hojas? — 387. ¿Cuáles son las variedades de 1.. vellosos. — 388. ¿Cuáles son las variedades de l¡. mohosos - CULTIVOS ESPECIALES DE ALGUNAS FLORES- 203 3S9. ¿Cuáles son las variedades de I!, perrunos? — 390. ¿Cuáles son las variedades de R. con estilos adheridos? — 391. ¿ Cuáles son las variedades de I!, de Ranki ? — 392. ¿Qué particularidad tiene el R. berberifolia? — 393. ¿Cómo se multiplican los rosales? — 394. ¿Cómo se cultivan los rosales? - — 393. ¿Cómo se cultivan en maceta? — 396. ¿Cómo se cultivan los crisantemas? — 397. ¿Pura qué sirven los girasoles? — 39S. ¿Cómo se clasifican las clemátides? — 399. ¿Cómo se cultivan la camelias? — 400. ¿Cómo se cu 1 1 i va el carrizo de Chile? — 401. ¿Cómo se cultivan los claveles? — 402. ¿Cuántas categorías hay de claveles? — 403. ¿Cuántas especies hay de amarantos? — 404. ¿Cómo se arregla bien un jardín? ' ■ ) i •’ . ’ : v . • i INDICE Paginas. Introducción 3 PRIMERA PARTE Cap. I. — Los tejidos elementales de las plantas 0 Nulas complementarias 12 Cap. II. — La raíz .j-¡ Observaciones complementarias 21 Cap. III. — El tallo 23 Explicaciones complementarias 27 Cap. IV. — Las hojas 34 Ampliaciones al estudio de las hojas 41 Cap. V. — Ramificación 43 Cap. VI. — La vida de la raíz 43 Funciones de las hojas 47 Circulación de la savia 49 Crecimiento de los vegetales 30 Nutrición de los vegetales , ;¡0 Cap. Vil. — Inflorescencia 32 Cap. VIII. — La flor 93 Cap. IX. — El fruto f¡(¡ Explicaciones complementarias 09 Apéndice al CAr. IX. — Eos fundamentos de la clasificación Si Cap. X. — Las plantas acodiledóneas S3 Cap. XI. — Multiplicación de los vegetales 95 Cap. XII. — Cuidados del cultivo 109 SEGUNDA PARTE Cap. XIII. — Cultivos especiales de frutales 12 fi Cultivo del aguacate 123 » » chirimoyo 129 " » guayabo 130 » de la granadita de china 1:¡1 206 ÍNDICE. » » higuera de pala 132 » del naranjo 132 u de los plataneros 136 » de la higuera 137 » del granado 13S n ii albarleoquero 139 » n cerezo 140 >> ii ciruelo 141 i> >i frambueso 142 ■i » membrillero 143 » » peral 145 a de la pifia de América , 147 TERCERA PARTE Cap. XIV. — Cultivos especiales de legumbres 151 Cultivo de los espárragos 15S Cap. XV. — Cultivos especiales de legumbres [continúa). 161 1° Plantas que se cultivan para utilizar las raíces Id ” >> 'i hojasó las hojas y tallos. 162 • jU 11 >i ii llores 164 ” i> ii frutos 163 **“ ” >> " bulbos i6ü 11 >i a medicinales iqq CUARTA PARTE C.tr. XVI. — Jardinería 171 Cap. XVII. — Cultivos especiales de algunas flores 134 UMAIM1 FECHA DE DEVOLUCIÓN El lector se obliga a devolver este libro antes del vencimiento de préstamo señalado por el último sello . 4 NUEVOS TEXTOS CONFORMES Á LA PEDAGOGÍA MODERNA Matte (C.). Nuevo método fonético, analítico, sintético para la Enseñanza simultánea de la lectura y escritura, con 50 láminas. 1 t. 8°. Holandesa 0.14 Carrillo (C. A.). Nuevo método inductivo, analítico, sintético para la Enseñanza simultánea de la lectura y escritura, con 50 láminas. 1 1. 8°. Holandesa 0.16 Frascuelo. Libro de lectura corriente. Nociones elementales sobre la moral, la economía política, la agricultura, la legis- lación usual y la higiene, por G. Bruno, coa 250 grabados instructivos. 1 1. 12. Holandesa .... . , . 0.50 Susnnitn. Historia do una familia feliz. Libre de lectura para uso de las señoritas. Moral, Economía doméstica, Cuidado de casa, Cocina, Costura, Lecciones de cos.js, por M. Robert Halt, con 250 grabados. 1 1. 12. Holandesa 0.50 Hernández (J. S.). Nociones de geometría intuitiva. Método analítico sintético. Sumarios y cuestionaiáos, ejercicios y observaciones, problemas, con 200 grabados. 1 1. 12. Holan- desa ... 0.30 Seignobos. Compendio de la Historia de la civilización desde los tiempos más remotos hasta nuestros días, con 200 gra- bados. 2 a edición. 1 1. 12. Holandesa 1.00 Lector mexicano. Primer libro de lectura por el profesor A.Oscoy, con 250 grabados en el testo. 1 1. 12- Holandesa. 0.25 Díaz de León (J.). Lecciones de cosas. Año preparatorio de la Enseñanza de las ciencias físicas y naturales, al alcance de los niños. Comprende la Guía del maesr.ro y el testo para el niño, con 70 láminas. 1 1. 12. Holandesa 0.40 Díaz de León (J.). Nociones elementales de agricultura para las escuelas primarias especialmente las rurales, con 100 gra- bados. 1 t,. 12. Holandesa .... 0.60 Gómez (R.). Curso del Lenguaje. Trimer año. Vocabulario ense- ñado intuitivamente. Estampas para descripción ; temas y cuestionarios para redacciones breves; Gula del maestro, con 160 láminas en colores y r n negro. 1 t. 4 o . Holandesa . 0.50 Gómez (R ). Curso de Lenguaje. Segundo año. Agrupación de las palabras según las nociones de la vida práctica. Vocabu- lario descriptivo conforme á las sensaciones que los objetos nos prulueer., manera de formar las familias de palabras, y ejemplos prácticos de descripción. 1 t. 4, con 62 láminas. Holanaesa . . . . . 0.50