ISSN 0037-8437
ANALES
DE LA
SOCIEDAD CIENTIFICA
ARGENTINA
AÑO 2011 - VOLUMEN 244 - N° 1
SUMARIO Pag.
NORA SUSANA PFLÜGER, MARÍA CRISTINA CORDERO, JOSÉ
ANTONIO RAPALLINI, SAMUEL EDUARDO LOZADA VILLENA,
MIGUEL ÁNGEL STAIANO - Ética Profesional y Laboral: Desafío para
El Ingeniero 5
DR. JOSÉ DOBOVSEK - La Cuestión del Sahara Occidental y El Derecho
Internacional Público 13
ANGEL ALONSO, SILVIA G. IRAÑETA, SANTIAGO R. RODRÍGUEZ,
KRIKOR MOUCHIÁN Y JULIO F. ALBÓNICO - Polutantes ambientales
no convencionales en patología humana. Papel de las proteasas del reduvídeo
Triatoma infestans y de la cucaracha Periplaneta americana. 2 1
JOSÉ LUIS SPERONI - El “Apóstol Civil'’: general doctor Agustín
Álvarez. Reflexiones a propósito de una paradoja.
37
SOCIEDAD CIENTIFICA ARGENTINA
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AÑO 2011 - VOLUMEN 244 - N° 1
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1912-1913
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1976-1988 Ing. Agr. Eduardo Pous Peña
1988- 1989 Ing. Augusto L. Bacqué
1989- 1992 Ing. Lucio R. Ballester
1993- 1 999 Dr. Arturo Otaño Sahores
1999-2001 Dr. Andrés O. M. Stoppani
2001-2005 Dr. Alfredo Kohn Loncarica
2005-2009 Dr. Jorge R. A. Vanossi
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° I *2011 • Pag. 5
ÉTICA PROFESIONAL Y LABORAL:
DESAFÍO PARA EL INGENIERO
Nora Susana PFLÜGER u, María Cristina CORDERO u, José Antonio RAPALLINI M,
Samuel Eduardo LOZADA VILLENA ’Á Miguel Ángel STAIANO 16
1 UNITEC, e.f. Unidad de Investigación y Desarrollo para la Calidad de la Educación en Ingeniería con orientación al
uso de TIC; 2 Universidad Católica de La Plata UCALP, Instituto J.N. Terrero;' INIFTA (UNLP, CONIC'ET); 4 CETAD
(UNLP);5 SEASING SRL; 6 Telefónica de Argentina SA
uniteconline@gmail.com / congresosunitec@gmail.com
RESUMEN
Con el presente trabajo nos proponemos destacar la urgencia social de revalorar la ética en el ejercicio de
las distintas profesiones y en particular de la ingeniería.
Distinguimos entre “ética profesional” y “deontología profesional”; la primera es la disciplina que estudia
los contenidos normativos de conducta en una profesión y la segunda, expresa los deberes mínimamente
exigibles a los profesionales en el desarrollo de su actividad y suele recogerse por escrito en “códigos de-
ontológicos”, que pierden sentido si se olvida su conexión con la ética.
Señalamos también la diferencia entre “ética” y “ethos”: una es un conjunto de principios racionales que
deben regir nuestro actuar; el otro es una actitud vital, que brota de los valores y es fuerza generadora de
mentalidad y estilo de vida.
En este sentido, vemos conveniente ubicar la ética del ingeniero en el contexto más amplio de la ética
laboral, ya que la ingeniería es una actividad que vincula al profesional con trabajadores de otros campos
(empresarios, empleados, obreros), sin cuyo correcto desempeño no podría él cumplir eficazmente su tarea
específica.
Consideramos también que el estudiante de ingeniería debe incorporar de alguna manera las nociones de
ética y de responsabilidad profesional desde los primeros años de su formación universitaria.
Palabras clave: Ética y responsabilidad profesional, ética laboral, ética del ingeniero.
ABSTRACT
With the present work we attempt to highlight the social urgeney to revalue (to reassess) the ethics in the
exercise of the different professions and particularly in engineering.
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We distinguish between "ethics” and "professional ethics”: the first is the discipline that studies the norma-
tive contents of conduct in a profession and second. expresses the minimal duties required to professional
people in the development activity and is commonly collected by writing in "codes of conduct”, that lose
meaning (sense) if missing the connection with ethics.
We also note the difference between “ethics'’ and "ethos”: one is a set of rational principies that should
govern our aetions, the other is a vital attitude that springs from the valúes and driving forcé of mind and
lifestyle.
In this regard, we should place the ethics of the engineer in the broader context of the work ethics, since
engineering is an activity that ties to the professional with workers of other fields (empioyers, employees,
workers), without whose proper performance he could not effectively ful 111 1 its specific task.
We also consider that the engineering student should incorpórate ethics slight knowledge and professional
responsibility from the early years of his university formation.
Keywords: ethics and professional responsibility, work ethics, ethics of the engineer.
INTRODUCCIÓN
Cuando hablamos de ética en el ejercicio de una profesión, debemos tener en cuenta que ésta no se distingue
esencialmente de la ética del padre de familia, del maestro, del comerciante, del ciudadano, dado que es
siempre el ser humano el que está detrás de todo acto voluntario, malo o bueno. Al referimos a la ‘ética
profesional' no podemos desvincularnos de la normativa ética general. Sin embargo, una mirada particu-
lar sobre lo 'profesional' puede ayudarnos a iluminar ciertas responsabilidades e incluso desafíos que se
suelen presentar en el desempeño específico de esa actividad.
Ya que son muchos los sistemas éticos que se han ido proponiendo hasta nuestros días, nosotros optamos
por una concepción que se apoya en la tradición del pensamiento occidental, basada en la reflexión iniciada
por los griegos de la Antigüedad clásica, para los cuales la inteligencia humana era capaz de captar la esen-
cia de las cosas (lo que ellas realmente son) y definirlas según criterios objetivos.
Consideramos que el ser humano, dotado de conciencia, por su propia naturaleza hace referencia a un orden
ético y moral, y está capacitado para conocerlo y ajustarse a él. La Etica, como disciplina científica, estudia
los principios que deben regir la conducta humana, para mayor perfección del hombre y armonía de la so-
ciedad. Se trata de una ciencia práctica o normativa: es ciencia porque parte de principios universales, y es
normativa, porque orienta la praxis de la conducta humana.
En esta misma línea, podemos distinguir entre una Etica general (conocimiento que se ocupa de los grandes
principios a los que debe responder la conducta) y una Etica social (aplicación de estos principios en la
sociedad). Dentro de esta última, la problemática laboral y profesional ocupa un lugar destacado en nuestra
época.
El objetivo del presente trabajo es ayudar a despertar la conciencia de la necesidad del desarrollo de una
ética profesional en el ejercicio de la ingeniería que no sea ajena a los problemas sociales de nuestro tiempo,
especialmente en el campo del trabajo, y se inspire en actitudes de servicio, justicia y solidaridad.
Como metodología, hemos consultado una diversidad de textos, en su mayoría de autores contemporáneos
y que se dedican a la formación de universitarios, prestando particular atención a su preocupación por el
panorama confuso que se presenta hoy en el plano de la ética y la urgente necesidad de clarificar conceptos;
luego hemos cotejado este material con nuestra propia experiencia como profesionales y catedráticos, y
finalmente hemos arribado a conclusiones consensuadas.
DE LA ÉTICA DE PLATÓN Y ARISTÓTELES A LA MORAL DEL YO NO FUI’
Según sostienen Petrinelli y Witemburg [2], profesores argentinos de Ética y Filosofía, ‘...la Ética que se
inicia en Grecia (Sócrates, Platón y Aristóteles) es un testimonio claro de la preocupación moral. Así lo
entenderá el Medioevo (desde los Padres griegos y latinos hasta la Alta Edad MediafCon la modernidad,
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comenzará una ética cuyo único sustento será la conciencia moral subjetiva. Se va dejando de lado toda
fundamentación metafísica de la moral. El antropocentrismo será lo único a tener en cuenta. El resultado:
éticas relativistas, subjetivistas y reduccionistas. Con la llegada de la llamada Posmodernidad parecería que
la ética 'muere', cada persona puede hacer lo que quiere...'
Estos autores explican así el drama de la Posmodernidad: ‘En el siglo XX, entre la Primera y la Segunda
Guerra Mundial se contaron más muertos que el toda la 'historia' de la raza humana, y esto 'gracias' al
mayor avance tecnológico en la fabricación de armas de destrucción masiva. Esto provocó una sensación
de 'angustia' en relación al futuro, a lo que vendrá. Preparándose para 'una tercera guerra mundial", las na-
ciones más poderosas se armaron 'para defenderse’. Aparece el individualismo exacerbado, la indiferencia
y el ‘sálvate como puedas'’.
Citando a otro autor, Armando Roa, señalan que las características de la Posmodernidad son las siguien-
tes:
La realidad ha dejado de ser un valor que el hombre va descubriendo para convertirse en algo que vale si
puede ser cambiado por otra cosa. Lo bueno y lo malo es lo que determina la mayoría.
Hay una primacía del placer y del consumismo, en desmedro del sacrificio. El ser humano está preocupado
por lo exterior y por las apariencias.
La vida es no tener problemas, es dejar transcurrir el tiempo sin mayores preocupaciones. No comprom-
eterse, no hacerse responsable, ‘yo no fui'.
LO URGENTE: TOMAR CONCIENCIA DE LA NECESIDAD DE UNA ÉTICA
Ante lo expresado por Petrinelli y Witemburg, se podría argumentar que la nuestra es una época difícil para
mantenernos dentro de lo ético y lo moral, que existen muchos factores de desequilibrio y dispersión y que
nos ha tocado vivir 'tiempos muy duros'.
A lo que el profesor de Filosofía Leonardo Polo [5], catedrático de la Universidad de Navarra, contesta
categóricamente: 'Todos los tiempos son duros. El mundo histórico humano está surcado de quiebras y de
omisiones y se resiste al control unitario. Sin embargo, no siempre ha faltado la capacidad para enfrentarse
adecuadamente con la situación. Pero el presente resulta doblemente áspero porque hay un desfase, una
diferencia, entre la situación y el modo como se actúa en ella. En la falta de adecuación entre la actitud y los
asuntos estriba la verdadera penuria de nuestro tiempo; no es sólo difícil de suyo; es difícil, además, porque
siendo muy complejo se trata como si no lo fuera. Y en esta diferencia aparece agravada la dificultad. Al no
afrontar en sentido propio la situación nos sentimos arrastrados por el acontecer’.
El individualismo y la superficialidad de criterio, que tan puntualmente señala Leonardo Polo, han traído
como consecuencia gravísimos problemas sociales, especialmente en el campo del trabajo, que afectan a
la familia y menoscaban la dignidad del hombre. No hace falta ser sociólogo para darse cuenta de que los
conflictos laborales ocupan la primera plana de todos los diarios y son el principal dolor de cabeza para los
gobernantes. La pobreza, la desocupación, la explotación, a pesar del discurso de las diferentes ideologías,
no encuentran todavía una solución práctica.
Si el trabajo es un deber para el hombre, 'también es un derecho, a pesar de todos los problemas que plantea,
ya que el trabajo es tan fundamental para el hombre, tan crucial en su vida', y asi como lo han reconocido
pensadores de las más diversas tendencias: ‘...el trabajo procede inmediatamente de la persona, la cual
marca con su impronta la materia sobre la que trabaja y la somete a su voluntad' [6]. De aquí se deduce lo
urgente de tomar conciencia de la necesidad del desarrollo de una ética para todo trabajador y en particular
para el profesional, cuya formación superior y especializada implica una mayor responsabilidad.
LA ÉTICA SIRVE AL CRECIMIENTO DEL HOMBRE
Antes de referirnos específicamente a la ética de la profesión, queremos recordar que en este trabajo con-
sideramos al hombre como un ser racional (aunque algunas veces pueda ejecutar actos que no lo parecen),
dotado de conciencia moral, definida como 'juicio del entendimiento práctico sobre la bondad o maldad de
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un acto que hicimos o que vamos a realizar’ y a la que podría describirse como 'luz clarificadora en la vida,
faro de orientación en el obrar y catalizador del pensamiento que, en definitiva, es el resorte de la acción, el
motor que impulsa las decisiones y las motivaciones de cada resolución' [4].
Al decir 'conciencia moral’ no hacemos distinción esencial entre 'ética’ y 'moral’, aunque en el uso cor-
riente se aplique el primer término a los principios generales y el segundo a las costumbres: es lógico que
una conciencia capaz de captar lo que es moral y lo que no lo es, percibirá también, y en primer lugar, lo
que vaya acorde con la ética y lo que se aparte de ella.
No compartimos el prejuicio, muy extendido en nuestra época, a partir de una mala divulgación de las
conclusiones de la Psicología Profunda, de que toda norma moral (o ética) es 'restrictiva’ en un sentido
negativo, y de que el hombre dotado de una conciencia moral fina y alerta ha de ser necesariamente un
'reprimido’. Creemos, por el contrario, que una aceptación sensata de las normas universales de respeto y
convivencia, lejos de empobrecer psíquicamente al ser humano, lo hacen más capaz de existir plenamente
como persona.
'A veces se dice que la moral es una restricción. Absolutamente falso.’ -afirma Leonardo Polo- 'Si no vivo
de acuerdo con una moral, es que no sería capaz de ella. Ser moral es siempre ser capaz de. La moral tiene
que ver con la dignidad humana y la dignidad humana es la persona. A su vez, una moral sin virtudes es par-
cial. ¿Qué es la virtud? Crecimiento en el orden de la capacidad. Por eso, si se renuncia a la moral, se deja de
crecer. Crecer es mucho más que autorreal izarse, porque au torrea fizarse es poner el absoluto en el término.
En cambio, crecer es estar más allá del término... El crecimiento es precisamente ser más capaz' [4].
Conviene añadir que con las críticas que hemos seleccionado sobre la situación del hombre de nuestros
tiempos no queremos presentar un panorama desastroso ni tachar a todos los miembros de nuestra sociedad
de egoístas y corruptos. La opinión de los filósofos citados refleja lo que sucede mayoritariamente, no
exclusivamente. Se trata de apreciaciones intuitivas y globales, no aritméticas, ya que es muy difícil juzgar
el 'nivel ético' de una cultura por los mismos criterios estadísticos con los que se calcula el número de ac-
cidentes de tránsito o la extensión de una epidemia de gripe. Además, en toda época, por muy bajo que haya
caído su moral, existen grupos que presentan otros perfiles y alternativas, y ésta es una variable a tener en
cuenta y un terreno apto para trabajar en el futuro.
ÉTICA PROFESIONAL Y DEONTOLOGÍA
'Los maestros de la ética y del derecho, los responsables del Estado y la propia conciencia moral de los gre-
mios profesionales son unánimes en reclamar alguna clase de código de Deontología’, afirma el periodista
y filósofo español Jesús Iribarren [I],
En coincidencia con esta preocupación, distinguiremos sin embargo nosotros 'Etica' de 'Deontología’.
Mientras la ética de una profesión o tarea laboral ilustra en general sobre los valores y actitudes que debe
asumir el profesional, empleado o colaborador, de acuerdo con las exigencias de su actividad, un código
deontológico indica más detalladamente la conducta debida frente a una situación dada.
Advertimos que no todos los autores coinciden con esta distinción, pero a nosotros nos ha parecido muy
práctica para mejor describir las cuestiones de las que se ocupa el presente trabajo.
Por ejemplo: en una empresa, puede establecerse como norma ética general que todos sus empleados de-
ben desarrollar una actitud participaliva que tenga como objetivo el bien común. Dentro de esta norma, el
código deontológico indicará: presentarse al trabajo con asistencia y puntualidad, comunicar en forma y
tiempo las ausencias, dar aviso a un superior inmediato sobre objetos encontrados (dinero u otros valores),
comunicarse con los superiores, pares, colaboradores y clientes con amabilidad y cortesía, acudir a la tarea
diaria con indumentaria prolija y con elementos de seguridad adecuados, colaborar proactivamente en la
resolución de los problemas, etc.
Si separamos estas obligaciones de la norma general (‘activa participación para el bien común’), nos que-
dará un conjunto de prescripciones de los que el sujeto no entenderá el 'porqué’ ni el 'para qué’, cumplidos
mecánicamente en el mejor de los casos, y que serían susceptibles de aplicarse indistintamente tanto para el
bien como para el mal. Para dar un ejemplo extremo, y sólo a fin de entendernos: en cualquier banda de pil-
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 9
los suele haber un individuo educado, bien vestido, que lleva consigo sus propios ‘elementos de seguridad
y que informa al jefe sobre los objetos ‘encontrados’, pero eso no tiene nada que ver con el bien común, ni
con la ética, ni con la dignidad humana.
Sin ir tan lejos, es frecuente observar que cuando profesionales y empleados no se sienten personalmente
identificados con los objetivos y la normativa ética de la institución, incluso desde el punto de vista afec-
tivo. les resulta muy difícil ajustarse al código deontológico, y empiezan a ser necesarias la vigilancia y las
sanciones; mientas que una adhesión interna a la norma permite realizar la tarea con entusiasmo y vuelve
superfluo poner un ‘vigilante’.
ÉTICA Y ‘ETHOS’
Todo esto nos lleva a pensar que una conducta ética en el campo profesional no podrá desarrollarse vital-
mente sin el cultivo de lo que la Filosofía llama 'ethos’.
'Ethos' es una palabra griega que había caído en desuso en Occidente hasta que en la segunda década del
siglo XX fue rescatada por la escuela filosófica de Frankfurt, aunque algunos autores atribuyen más pro-
piamente a Max Scheler. con su 'ética de los valores’, el haber contribuido a llamar nuevamente la atención
sobre el tema.
No todos los pensadores modernos coinciden en el concepto de 'ethos’. En nuestra opinión, este vocablo,
que por su etimología quiere decir 'uso o costumbre', remite a un contenido que va mucho más allá. El
'ethos’ no se reduce a tener conciencia del bien y del mal. sino que implica una actitud vital, que brota de
los valores que el hombre lleva hondamente arraigados en su afectividad, hasta el punto de ser decisiva para
la reflexión y las resoluciones. Mientras la "ética’ es un conjunto de principios racionales que deben regir
nuestra conducta, captados a nivel intelectual, el 'ethos' es una reacción del hombre entero, que incluye
no sólo su intelecto, sino su sensibilidad y su adhesión afectiva a la norma ética. El ethos le da alma a la
ética.
Desde esta perspectiva, el ethos no consiste sólo en cumplir una exigencia de naturaleza ética, sino de satis-
facer necesidades profundas de la condición humana, de disponer al hombre -como ser personal y social- a
experiencias de respeto a su propia persona y de justicia y solidaridad con los otros, requisitos indispens-
ables para una vida humana plena.
‘El ethos -dice el educador chileno Hernán Alessandri- es una postura del corazón, que imprime sentido
a las realidades humanas más primarias: a la vida misma, al amor, a la familia, al trabajo, a la muerte. Es
una fuerza generadora de una ‘mentalidad’ y de un ‘estilo de vida’, en la acepción más amplia y global de
las cosas.
'La conciencia de dignidad es parte esencial del ethos, del sentido de la vida. Para construir un mundo digno
del hombre, necesitamos educar personas que posean tal conciencia enraizada en su ethos personal. Porque
la lucha será muy dura y compleja. Y no bastarán para ella ni los meros teóricos ni los voluntaristas’ [3],
EL INGENIERO Y EL MUNDO DEL TRABAJO
La palabra 'profesión' deriva del latín, con la preposición pro (en público, delante de) y el verbo fateor
(manifestar): de allí surge el vocablo professio (profesión), que remite a la persona que se dedica a cultivar
un arte y ejerce esta actividad públicamente, manifestándolo ante los demás.
Toda profesión se caracteriza por dos notas esenciales: el perfeccionamiento propio, ya que permite el
desarrollo de las cualidades y potencialidades de la persona, en el mareo de la responsabilidad moral, y el
servicio a la comunidad, ya que el hombre es un ser social por naturaleza y en sus acciones personales debe
procurar el bien de sus semejantes.
Son deberes de todo profesional: buscar bien común, no divulgar el 'secreto profesional' (informaeión que
le fue dada confidencialmente para llevar a cabo su labor), propiciar asociaciones (o colegios) de profesio-
nales que ayuden a establecer y conocer mejor las nomias éticas de cada profesión, procurar la justicia en
los contratos de trabajo, etc.
| Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 10
Para esto será necesario poseer aptitud intelectual (por la adquisición de un conocimiento científico que se
adquiere básicamente mediante los estudios universitarios y que se debe actualizar permanentemente) y ap-
titud moral para el cumplimiento de la norma ética, algo tan importante que muchas veces la incompetencia
o el fracaso profesional se debe al hecho de olvidar este aspecto.
En el caso de la ingeniería, como rama de la ciencia aplicada a la utilización de la materia y de las fuentes
de energía mediante invenciones útiles para el hombre, su campo es tan amplio, que un ingeniero está en
contacto permanente con trabajadores de otras áreas (empresarios, empleados, obreros, arquitectos, pro-
fesionales de la salud), además del que se deriva del inevitable trabajo en equipo con sus colegas. Sus
obligaciones lo colocan bajo el imperativo de ubicar su ética profesional en el campo más amplio de la
ética del trabajo.
Deberá por lo tanto conocer los problemas éticos que pueden plantearse en el mundo empresarial: ganancias
y precio justo, formas de contrato, compromiso entre empleador y empleado, ventajas y riesgos morales
de los distintos tipos de empresa (sociedades anónimas, PYMES, multinacionales, empresas familiares,
etc.) Tendrá que interiorizarse también de las condiciones de vida del obrero y de sus necesidades. Se verá
obligado a informarse sobre temas relacionados con la salud, el bienestar de la población y la protección del
medio ambiente. Si además, tiene la oportunidad de comunicar su saber a las nuevas generaciones, desem-
peñándose como profesor, tendrá que adquirir también la adecuada capacitación pedagógica.
Tan altas exigencias no podrán cumplirse si el profesional de la ingenieria no está animado, en lo ético, por
la búsqueda de la verdad, y en su ethos. por la decisión de servir al hombre, movida desde su interior por
un profundo espíritu de justicia.
DESAFÍOS DE UNA VOCACIÓN
Podemos decir entonces que el mundo de hoy presenta nuevos desafíos para la responsabilidad del ing-
eniero, que se plantean ya desde su formación universitaria, porque para que ésta lo haga capaz de realizar
su futura tarea como búsqueda de la verdad y como servicio, será necesario prestar atención en ella a tres
campos esenciales:
La vocación: Nace de la conciencia de nuestros dones naturales, unida a la determinación de cultivarlos
para servir a la sociedad. En cada caso será necesario un discernimiento profundo sobre nuestras propias
capacidades, inclinaciones y posibilidades, para saber si realmente estamos 'llamados' (en el sentido eti-
mológico de la palabra 'vocación’, del latín ’vocare’: 'llamar’) al desempeño de una profesión determinada.
Dentro de ellas, la ingeniería supone más de un talento. Nunca se insistirá lo suficiente sobre este punto,
porque son muchas las presiones sociales que pueden llevar a un joven a elegir una carrera para la que no
está hecho: porque es la tradición familiar, porque se gana buen dinero, porque da prestigio, etc.
Ahora bien: si la decisión ha sido correctamente tomada, corresponde entonces el deber de perseverar.
La formación profesional básica: Esta debe comprender, además de las asignaturas específicas, el uso
adecuado de las modernas tecnologías de la comunicación, incorporadas no en forma esporádica, sino
habitual, a la metodología de estudio. Dado lo que hemos expresado sobre los vínculos del ingeniero con
distintos sectores de la sociedad, convendría agregar alguna materia o seminario de formación humanística,
preferentemente en el área de las Ciencias Sociales, y una preparación en cuestiones relativas a la salud y a
la ecología. En algunas Universidades estas preocupaciones están contempladas, pero no nos consta que la
incorporación de estos contenidos se haya verificado en todas. También sería importante volver a valorar la
formación jurídica, incluida tradicionalmente en la carrera ('ingeniería legal'), para poder ejercer su futura
profesión con cabal conocimiento de las leyes vigentes. Todo esto sin perjuicio de cursar posteriormente
una ingeniería especializada en cualquiera de estas áreas.
La formación en la ética profesional: Sin dejar de lado la importancia de la adquisición académica de no-
ciones de Ética y Deontología, pensamos que el perfil ético-moral el futuro profesional se define también
por el testimonio coherente de sus profesores y el diálogo con ellos. Ial vez tendríamos que buscar la forma
de asumir, en Latinoamérica, la tradición de algunas universidades europeas, en la que los estudiantes se
enriquecen con la experiencia de los profesores a través el contacto humano desarrollado en espacios ex-
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. H
tracurriculares de convivencia (encuentros, debates, excursiones, eventos deportivos, etc.)- Dada nuestra
idiosincrasia, convendría que tales espacios no quedaran librados a la espontaneidad, sino que formaran
parte del plan de la carrera, con una finalidad pedagógica. Esta inclusión implicaría también una mayor
exigencia respecto de la idoneidad moral de los docentes.
Al comienzo de este apartado hablábamos de 'nuevos desafíos'. Lo vemos así porque entendemos que
llevar a la práctica estas propuestas supone un replanteo de planes de estudio, un renovado esfuerzo aca-
démieo y una decisión de considerar la profesión bajo una mirada mucho más amplia que la que hoy se
acostumbra. Pero creemos que los resultados nos resarcirán ampliamente del tiempo y la energía invertidos
en este empeño.
CONCLUSIONES
Ante la complejidad del mundo moderno, el ingeniero debe cultivar la conciencia de ser un profesional
que debe estar al servicio de la dignidad del hombre, conocer los problemas sociales y tener la voluntad de
formarse permanentemente.
Aunque esta formación dure toda la vida, los años de estudios universitarios son cruciales para el despertar
del sentido de la responsabilidad y la incorporación de la ética a la tarea específica y al conjunto de la
personalidad. De allí que los profesores debamos comprender que nuestra labor no se reduce a impartir
conocimientos, sino que en todo momento nuestro compromiso es el de educar con el ejemplo de nuestra
conducta. De ese modo, ayudaremos a los jóvenes a incorporar vitalmente la ética, es decir, a desarrollar el
'ethos' necesario para responder correctamente a la problemática moral de la profesión.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
fl] Iribarren, J. Ética de la información BAC, Madrid. 1982
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LA CUESTION DEL SAHARA OCCIDENTAL Y
EL DERECHO INTERNACIONAL PÚBLICO
Dr. José Dobovsek
Doctor en Ciencias Jurídicas
Catedrático de Derecho Internacional Público
(Universidad del Salvador - Instituto Universitario de la Policía Federal Argentina)
Catedrático de Derecho Comunitario Americano
(Université París I Pantheón Sorbonne - Universidad del Salvador)
Quienes ejercemos la profesión del Derecho, y lo enseñamos en las Universidades, sabemos que
la justicia se logra aplicando la norma general a un caso concreto.
La norma jurídica crea derechos y obligaciones que deberán ser aplicados a cada situación, res-
petando las particularidades de cada una de ellas. Allí la importante función de quien debe decidir esa apli-
cación. de transformar lo que es un principio general en una decisión concreta, que pondere cada situación
teniendo como horizonte a la justicia y la equidad.
También sabemos que en todo sistema jurídico, tanto estatal como internacional, los derechos y
principios no son absolutos. Existen situaciones concretas, y a veces extremas, que exigen su adaptación.
Con lo expuesto se quiere puntualizar, que si bien existen principios inobjetables, estos deberán
ser cuidadosamente aplicados a cada caso, ponderando sus particularidades, pero con el cuidado de no caer
en un relativismo normativo que implique la derogación de esa norma o principio.
El proceso de descolonización del Sahara Occidental evidencia, por su duración y las reclamacio-
nes de las partes involucradas, su extrema complejidad. En razón de ello, la Asamblea General de las Nacio-
nes Unidas, solicitó mediante la Resolución 3292 del 13.12.1974. la intervención de la Corte Internacional
de Justicia, para que pudiera aclarar situaciones jurídicamente dudosas y fijar las pautas hacia donde debía
orientarse el proceso de descolonización. Así lo hizo la Corte con su dictamen del 16 de octubre de 1975.
vale decir hace más de 25 años.
La particularidad de este conflicto, es que no tiene lugar entre una potencia colonial y un pueblo
sometido a ésta, sino entre el Estado de Marruecos . quien reclama al Sahara como territorio propio, y con
parte de su población, que desea constituirse como un Estado independiente. No es el reclamo de un Estado
lejano, ajeno y extraño al territorio colonial, sino de un Estado que exige la devolución de lo que considera
propio.
I.- Breves antecedentes del conflicto
A pesar de la opinión consultiva de la CU, aún no se ha podido dar fin a este conflicto, cuyo orí-
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gen se remonta al año 1884. En esta fecha España, como potencia colonial procedió a ocupar el territorio
del Sahara Occidental, bajo la forma jurídica de un "‘protectorado”. Así surge del decreto real del 26 de
diciembre de 1884, en el cual el Rey de España proclama que toma bajo su “protección” el territorio del
Rio de Oro. sobre la base de acuerdos concretados con los jefes de las tribus locales.
Al momento de la ocupación española, el territorio en conflicto se encontraba habitado por varios
pueblos nómades, que tenían cierta organización social y política.
El Estado de Marruecos sostiene que ejercía su poder soberano en base a una inmemorial, con-
tinuada e ininterrumpida posesión. La Corte Internacional, si bien no hizo lugar a la pretensión de la sober-
anía territorial, constató que existía un particular lazo religioso y político de lealtad entre el Sultán de Mar-
ruecos y las tribus nómades del lugar. Actos de autoridad, como el cobro de impuestos y los de resistencia
militar a las penetraciones extranjeras, avalan según Marruecos, el ejercicio de su poder soberano. Además
para acreditar su potestad territorial, se alegó la firma de varios tratados internacionales que implicaban el
reconocimiento de terceros Estados de la soberanía Marroquí. ( acuerdos celebrados con España. Estados
Unidos, Gran Bretaña, Alemania entre 1767 y comienzos del siglo XX). Lo cierto es que en una sociedad
de raíz islámica, la soberanía territorial se fundaba más en factores religiosos y personales, que en el real
y efectivo ejercicio del poder político . No es de olvidar que era imposible fijar límites fronterizos en el
Sahara, caracterizado por el nomadismo de muchas tribus y la complejidad étnica y sociopolítica de su
población.
Es en base a tales antecedentes, que iniciado el proceso de descolonización ante la Asamblea
General de las Naciones Unidas, Marruecos se presenta reclamando la “restitución” de sus territorios usur-
pados por España.
No se debe obviar, que si un Estado acredita haber tenido bajo su soberanía un territorio ocupado
por una potencia colonial, el proceso de descolonización es mucho más simple': se procede a la retrocesión
(devolución del territorio), incluso sin la previa consulta a la población del lugar . Vale decir, no se aplica
el “principio de la autodeterminación de los pueblos”, sino lo que en derecho se denomina el principio de
la reparación integral, “restitutio ad ¡ntegrum”, volver las cosas al estado anterior.
En las Naciones Unidas y dentro del proceso de descolonización, los Estados que reivindican territorios
ocupados por potencias coloniales se fundamentan en sus reclamaciones por el desmembramiento sufrido
por el hecho colonial, sea por un acto violento o inclusive por un tratado, sin importar si en ese momento
hayan existido como Estados.
En la práctica de las Naciones Unidas, pocos territorios no Autónomos, de un total de más de cin-
cuenta, han sido objeto de consultas mediante referéndum. ( citamos los casos del archipiélago de Tokelau,
consultas de febrero de 2006 y octubre de 2007, de Timor Oriental, consulta de agosto de 1999, y de Irian
Jaya ó Papúa Occidental consulta de julio de 1969) .
Como el ejercicio de la soberanía Marroquí al momento de la ocupación española, fue cuestio-
nado tanto por España, como por los representantes de la población local, avalados por el Estado de Argelia,
la Asamblea General, para dilucidar la incertidumbre jurídica, decide pedir la opinión consultiva de la Corte
Internacional de Justicia.
En resumidas cuentas, la Corte Internacional en 1975, entendió que:
I .-no se acreditó de manera categórica que Marruecos ejerciera su soberanía territorial sobre el Sahara Oc-
cidental al momento de la ocupación por España (1884).
2. - como corolario, no corresponde la “retrocesión” del territorio entre Estados, por lo que, la Corte dic-
taminó que:
3. - debía continuarse con el proceso de descolonización iniciado ante la Asamblea General, en los términos
de la Resolución 1514. respetando la voluntad de la población natural del lugar. Pero en su extenso dicta-
men, agregó que:
4. - para la descolonización, la Asamblea General debía tener en cuenta los vínculos jurídicos personales
existentes al momento de la colonización, entre las tribus saharianas y el Sultán de Marruecos. Estos vín-
culos jurídicos, de carácter personal, no debían ser desconocidos en el proceso a seguir por la Asamblea
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General.
De lo brevemente expuesto, se constata que existe un conílicto entre las reclamaciones territo-
riales de Marruecos con las reclamaciones de independencia y creación de un nuevo Estado, por parte del
grupo Frente Polisario (quien se atribuye la representación de la población Saharaui) y que es apoyado por
el Estado de Argelia (interesado geopolíticamente en tener una salida al océano Atlántico con la creación de
un nuevo Estado).
Entre ambas reclamaciones, la Asamblea General debe continuar con su proceso de descoloni-
zación, respetando la voluntad de su población (principio de la libre determinación de los pueblos) y los
vínculos jurídicos personales existentes entre esa población y el Estado de Marruecos, tal como lo dic-
taminó la CU.
En este el proceso de descolonización, la Asamblea General decide la realización de un referé-
ndum, o consulta popular, para que la población originaria determine su futuro político (aplicación del
principio de autodeterminación) todo ello conforme resolución 3458 del 10.12.1975.
Este referéndum debía llevarse a cabo respecto de todas las poblaciones saharianas originarias del
territorio (sesión plenaria AG. 2435 del 10. 12. 1975). El problema surgió por la disconformidad, entre las
partes reclamantes, en determinar el padrón electoral, vale decir a quién incluir como integrante de la po-
blación originaria sahariana. Las posiciones resultan irreconciliables, básicamente por la propia naturaleza
nómade de las múltiples tribus no afincadas en un territorio y en constante migración. Hablar de un territo-
rio fijo y circunscripto, en el cual localizar en forma estable y permanente a estas tribus, resulta un acto de
abstracción absoluta. No se puede limitar dentro de un territorio determinado a este variado grupo humano,
quien alternó históricamente su residencia desde el Sahara occidental con otras regiones de Argelia o Mau-
ritania, (ver párrafo 88 de la Opinión Consultiva). A ello se suman los considerados repatriados, que siendo
pobladores originarios, debieron emigrar por diversas razones, vgr. cuestiones políticas, económicas o de
subsistencia.
Estas dificultades insalvables provocaron que el Plan de Arreglo propuesto por las Naciones Uni-
das en 1991 devino en inaplicable. Igual suerte corrieron otros proyectos y planes de paz oportunamente
propuestos por el Enviado Personal del Secretario General S. James Baker.
El Consejo de Seguridad mediante su res. 1541 del 29.4.2004 concluyó que la cuestión del ter-
ritorio del Sahara deberá llegase a través de una solución POLÍTICA negociada. El 30.4.2007 el
Consejo de Seguridad dicto la Res. 1754 por la que: llama a los Estados de la región a cooperar
para poner fin al estancamiento y lograr una solución política y establece la negociación como medio para
lograr la
aplicación del principio de la autodeterminación.
La persistencia de estas dificultades, para configurar el padrón electoral, hizo que el enviado del
Secretario General Sr. Peter Van Walsum, concluyera en su informe del 2 1 .4.2008. que "un Sahara indepen-
diente no es una opción realista y la independencia del Sahara es un objetivo inalcanzable.”
II.- Bases jurídicas para la solución del diferendo
Inicialmente los negociadores adoptaron posiciones irreductibles y enfrentadas, como
un blanco y negro:
- la posición de Marruecos, que reclama la anexión plena y absoluta del territorio del Sahara.
- la posición del Frente Polisario y de Argelia, que reclaman la creación de un nuevo Estado, soberano e
independiente.
El estancamiento de las negociaciones evidencia que la solución al diferendo, no puede
polarizarse entre estos dos extremos: independencia o anexión, sino que deberá surgir de una zona gris más
o menos próxima a estos dos extremos irreductibles.
En materia de descolonización existen dos principios fundamentales y aceptados por el Derecho
Internacional:
a. - el de la libre determinación de los pueblos, respetando sus deseos (res. 1514 párrafo 2:l)
b. - el principio de la unidad nacional e integridad territorial de un país (establecido en la res. 1514 párrafo
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6 y en la res. 2625 párrafo 7).
En este punto, volvemos a lo referido al comienzo de este trabajo, una norma o principio jurídico
debe adaptarse a cada situación, respetando sus particularidades, pero con la extrema precaución de no
generar un relativismo que lo derogue.
Es por ello que ambos principios, de la libre determinación y de la integridad territorial, no son
absolutos ni contemplan una solución única. No significa, como única opción, la creación de un nuevo
Estado. Tampoco implica que sólo se pueden implementar mediante una consulta popular, o referéndum.
Corresponde considerar lo siguiente:
a. - En primer lugar, se observa que la Asamblea General ya resolvió, mediante la Res. 1514, que
el proceso de descolonización no necesariamente significa la creación de un nuevo Estado. Así lo dispone
al enumerar allí otras y distintas posibilidades:
- la asociación a un Estado
- la integración con otro Estado
b. - La Res. 2625, posteriormente adoptada por la AG, amplia esta variedad de formas. En su pár-
rafo 4 menciona:
"...., la adquisición de cualquier otra condición política, ...., constituyen formas del ejercicio del principio
de la libre determinación.”
La frase “adquisición de cualquier otra condición política” es genérica, pero abarca otras solu-
ciones idóneas para poner fin a este conflicto de descolonización. Conflicto que requiere una solución dis-
tinta a los dos extremos persistentemente invocados por ambas partes: o la independencia, o la integración
absoluta.
Es por ello que, aplicando el principio de la libre determinación, bien pueden contemplarse otras
opciones, como los acuerdos constitucionales de autonomía, o acuerdos de carácter federal o confederati-
vos, o las que se consideren pertinentes, pero siempre y en todo supuesto, tomar en cuenta los deseos de los
pueblos interesados (ver lo resuelto por la CU. en su opinión consultiva, en el párrafo 33)
Así, la independencia completa o la anexión lisa y llana, no constituyen la única forma de imple-
mentación de la libre determinación. La Asamblea General de las Naciones finidas ya promovió otras solu-
ciones distintas a la creación de un nuevo Estado, y siempre teniendo presente las múltiples circunstancias
que se dieron en cada caso de descolonización tratado.
III.- La opinión consultiva de la CIJ
Junto con las Res. 1514 y 2625 de la AG, que son los pilares jurídicos del proceso de descoloni-
zación, corresponde resaltar lo resuelto por la CIJ en su opinión consultiva sobre el Sahara Occidental y
que constituye la tercera columna para la solución de este diferendo:
Corresponde destacar los siguientes conceptos relevantes que surgen de su extenso texto:
a. - que al momento de la colonización territorial por España, el Sahara Occidental no era una térra nullius,
vale decir, ya existía una autoridad territorial. Sostiene la Corte Internacional, que conforme las pruebas
aportadas en esa instancia consultiva, no puede concluir que el Estado de Marruecos ejercía una soberanía
territorial . debido a las particularidades propias (desierto y por ende despoblado) y por el carácter nómade
de las tribus, quienes se desplazaban constantemente y por distancias considerables.
Concluye la CU. que el territorio no era “térra nullius” por cuanto la autoridad sobre el mismo era
ejercida por las múltiples tribus nómades de la zona.
b. - que al momento de esta colonización. Marruecos, tenía vínculos jurídicos sobre la población del lugar.
Los menciona en sus párrafos 87 y 88 como lazos de lealtad o vasallaje.
c. - que éste vinculo entre Marruecos y el Sahara Occidental, deberá ser tenido presente por la AG. al tratar
la solución del tema en cuestión. Así lo dispone en su párrafo 151 cuando se refiere a:
"otros vínculos jurídicos para los diversos métodos del proceso de descolonización”
Marruecos no es un tercer Estado que pretende derechos sobre un territorio colonial, sino un Es-
tado vecino, no separado geográficamente, que tuvo vínculos históricamente comprobados y reconocidos
por la CU respecto del territorio del Sahara.
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d.- P inalmente la CU expresa que se le pidió una opinión consultiva y que esta opinión deberá ser tenida en
cuenta por la AG para implementar la descolonización del Sahara Occidental. ( párrafo 161 del dictamen)
De lo expuesto podemos concluir que estamos en presencia de un proceso de descolonización
propio y particular, con características inauditas para la Comunidad Internacional, en el que confluyen
principios tales como de la “libre determinación de los pueblos”, y del respeto a los vínculos jurídicos con
el Estado de Marruecos, constatados por la C1J.
IV. - Valor jurídico del dictamen de la CU.
Corresponde puntualizar que el dictamen de la CIJ es una opinión, vale decir, no es una sentencia
obligatoria para los Estados. Sin embargo nadie podrá dudar de su tremenda autoridad y su relevancia para
el Derecho Internacional Público.
Pero, así como esta opinión no es obligatoria para los Estados, para la Asamblea General, sí es
vinculante. En efecto. Es manifiesto que los diversos órganos de una Organización Internacional deben
actuar en función de las decisiones adoptados por los otros que la integran. Sería un verdadero escándalo
jurídico institucional, si esta opinión consultiva de la CIJ no fuera receptado y seguido por la Asamblea
General como pauta del proceso de descolonización.
V. - Etapas del proceso de descolonización del Sahara Occidental
Podemos establecer dos etapas en este proceso de descolonización.
Primer etapa del proceso de descolonización: El referéndum o la consulta popular.
Inicialmente la solución se concentró en la organización de un referéndum. Este proceso se difi-
cultó por el problema de identificar al electorado. Existe un serio obstáculo para determinar, con el acuerdo
de las partes en conflicto, el padrón de la población habilitada para decidir sobre su autodeterminación, en
los términos de las Res. 3292 y 1514.
Estas dificultades insalvables provocaron que el Plan de Arreglo propuesto por las Naciones Uni-
das en 1991, devino en inaplicable. Igual suerte corrieron otros proyectos oportunamente propuestos por el
Enviado Personal del Secretario General Sr. James Baker.
Por todo esto, el Consejo de Seguridad, mediante su res. 1541 del 29.4.2004 concluyó que el
diferendo sobre el territorio del Sahara deberá concluir por medio de una solución política negociada.
Es así que una solución realista, seria y creíble debería contemplar la autodeterminación de los
habitantes de la región, así como respetar los vínculos jurídicos de Marruecos sobre el Sahara Occidental,
reconocidos por la CU.
Las posiciones extremas, de independencia o anexión, ya demostraron que no son viables e imp-
iden continuar con este proceso. Existe pues, la necesidad de compatibilizar ambos principios, dado que el
uno no debe anular al otro.
Segunda etapa del proceso de descolonización
Ante esta realidad, y el estancamiento de las negociaciones, el Estado de Marruecos presentó el
1 1 de abril de 2007 un proyecto que atenúa en gran medida su reclamo inicial de anexión plena. Propone
una “Iniciativa para la negociación de un estatuto de autonomía de la región del Sahara”, bajo la soberanía
de Marruecos.
Cabe entonces analizar, desde la óptica jurídica, la propuesta de Marruecos, y si se afecta en
alguna medida, el principio de la libre determinación del pueblo residente.
VI. - El proyecto de autonomía y el principio de la libre determinación de los pueblos.
Como ya se expresara, tanto la Comunidad Internacional como la Asamblea General, aceptan
varias modalidades para que se implemente el principio de la autodeterminación.
Lo importante y lo medular de este principio es que cada Pueblo pueda elegir libremente su esta-
tuto político y económico, ya sea bajo la forma de una independencia, de una asociación, de la integración
a otro Estado, o cualquier otra forma como lo menciona la res. 2625 de modo amplio:
“la adquisición de cualquier otra condición política...”
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La práctica internacional de la AG, demuestra que se adaptó el proceso de descolonización a cada
caso concreto aceptando las particularidades de cada pueblo.
Desde el punto de vista estadístico, el ejercicio de la autodeterminación se implemento con mayor
frecuencia bajo la forma de la negociación con los representantes de esos Pueblos, que a través de la con-
sulta por un referéndum.
Además, y refiriéndonos al referéndum, este modo resultó ser inaplicable al caso del Sahara
Occidental por la imposibilidad de formular los padrones electorales, es decir, precisar quien debía ser
consultado.
La propuesta de Marruecos es acorde al Derecho Internacional, y podría calificarse como de
Autodeterminación Autonomía, ya que conciba el principio de la autodeterminación con el de la integridad
territorial.
Se propone la creación de una Región Autónoma del Sahara con sus propios órganos ejecutivo,
legislativo y judicial y competencias definidas dentro de su límite territorial. Policía, Administración y
Justicia locales, recursos financieros propios y la participación en la explotación de sus recursos naturales.
Por su parte, se reconoce al Estado de Marruecos los atributos de soberanía territorial, bandera,
himno y moneda. También todo lo concerniente a la seguridad nacional, defensa y manejo de las relaciones
internacionales. El Rey será reconocido como tal con sus atributos políticos y religiosos.
En el artículo 27 de la propuesta se afirma que el Estatuto de Autonomía, será sometido a la libre
consulta de la población para que ésta decida el contenido y la extensión de su autonomía. Además, junto
a la autonomía de la población Saharaui. constitucionaimente garantizada, se preserva el principio de la
integridad territorial, invocado por el Estado de Marruecos.
Sobre esto último, se reitera el dictamen de la CIJ, que exige que el vínculo jurídico de Marruecos
con el Sahara Occidental, debe ser tenido en cuenta por la AG al orientar este el proceso de descoloni-
zación. Una propuesta que establezca la independencia y creación de un nuevo Estado, implica desconocer
estos vínculos jurídicos constatados por el máximo Tribunal.
Por tal razón, el proyecto de la Autonomía resulta una propuesta seria y creíble. Implica un paso
positivo al proceso de la descolonización. El Estado de Marruecos morigera su postura inicial de la anexión
lisa y llana, por una posición más flexible y acorde con la Opinión Consultiva de la CIJ y las Res. 1514 y
2625 de esta AG.
La autonomía propuesta, en base a un estatuto libremente elegido por la población del Sahara
Occidental, es un punto medio entre ambos principios internacionales: se respeta la autodeterminación
saharaui y la integridad territorial, constantemente reclamada por el Estado de Marruecos.
Todo esto obliga a tomar en consideración a esta propuesta de autonomía como un paso esencial
para la solución definitiva de este diferendo.
CONCLUSIONES:
1 . - La propuesta de autonomía se compadece con las res. 1514. 1541 y 2625.
2. - Con la Opinión Consultiva sobre el Sahara Occidental de la CIJ, quien en sus párrafos 151, 161 ,162
insiste en el vínculo jurídico entre Marruecos y la población natural del Sahara y que debe ser respetado
por la AG en el proceso de descolonización que se adopte.
3. - Con el sistema normativo de la Comunidad Internacional cuyos principios deben ser aplicados según las
particularidades de cada caso concreto.
4. - No es una propuesta definitiva, dado que debe ser negociada entre las partes involucradas.
5. - Se compadece con los antecedentes de descolonización en los que por mayoría se recurrió a la negoci-
ación entre las partes involucradas y que representen la voluntad de los pueblos.
6. - La autonomía propuesta es una modalidad del ejercicio de la autodeterminación dado que el pueblo
saharaui tendrá libertad para gobernarse política y económicamente. Podrán mantener su propia identidad
y administrar sus propios asuntos.
7. - Es una modalidad que ofrece una amplia variedad de arreglos constitucionales para proteger la identidad
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u autonomía del pueblo Saharaui.
8.- Es una solución que implica un gran avance al estancamiento del proceso de descolonización del Sahara
Occidental y ofrece una vía para un arreglo mutuamente aceptable.
8.- Finalmente corresponde destacar, que la autonomía fue una solución a la que recurrieron numerosos
Estados de la Comunidad Internacional, como India, Italia. Suiza, Dinamarca. Canadá, Alemania, el Reino
Unido, España respecto de las Islas Canarias, entre otros.
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POLUTANTES AMBIENTALES NO CONVENCIONALES
EN PATOLOGÍA HUMANA. PAPEL DE LAS PROTEASAS
DEL REDUVÍDEO TRIATOMA INFESTANS Y DE LA
CUCARACHA PERIPLANETA AMERICANA.
Angel Alonso, Silvia G. Irañeta, Santiago R. Rodríguez, Krikor Mouchián
y Julio F. Albónico.
Centro de Alergia e Inmunología. Hospital de Clínicas. Departamento de Microbiología. Facultad de Medicina.- UBA.-
Sociedad Científica Argentina. -
RESUMEN
Dos insectos pululan en la Argentina: la cucaracha Periplaneta americana en el ambiente citadino y el
reduvideo Triatoma infestans (vinchuca) en el espacio rural. Sus cuerpos muertos, se desecan, se momi-
fican y se pulverizan pasando a ser un contaminante del polvillo ambiental y del aire que respiramos. Lo
mismo ocurre con sus excretas con el insecto in vivo. Estos contaminantes contienen proteínas de distinto
peso molecular, pl y antigenicidad que inducen una respuesta inmune especifica a lgG en los animales de
experimentación (conejos y cobayos) y del isotipo IgE en humanos atópicos (portadores de rinitis/asma)
de diversas zonas del pais valorada con muestras de sangre y pruebas cutáneas de hipersensibi lidad in-
mediata con dichos antígenos. También provocan una neumonitis por hipersensibilidad en cobayos por su
inhalación crónica. Se enfatiza la necesidad de combatir a estos insectos considerando que con el cambio
climático al aumentar la temperatura habrá mayor pululación por acortarse sus periodos de reproduc-
ción.-
SUMMARY
The antigenicity of the proteins of the cockroach Periplaneta americana and the reduviid Triatoma infes-
tans was checked in rabbits and guinea-pigs as well as in normal and atopic subjeets. The synthesis of spe-
cific antibodies (lgG and IgE) was confirmed. Guinea pigs also developed a hypersensitivity pneumonitis
vvith cellular interstitial infiltrates (macrophages and lymphocytes) with chronic exposure. Both inseets
contamínate the whole country and all the strategies lo elimínate them are vvelcome and necessary.-
INTRODUCCIÓN
Los Trialomíneos son reduvídeos que constituyen insectos hematófagos de gran importancia sanitaria. Son
conocidos por las denominaciones vulgares de "‘vinchucas", “chipos, “chirimachas”, "pitos", “chinches
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aladas”, "barbeiros”, “conesone bugs” y "kissing bugs”, según la zona de América del Sur, Central y del
Norte en que se las encuentra. Comprenden a un centenar de especies, con hábitat silvestre y se hallan en
los nidos de las aves, madrigueras, oquedades de los árboles y cúmulos de piedras.
Las más importantes son las que se han habituado a colonizar la vivienda humana. Algunas especies, como
Triatoma infestans. se han transformado en estrictamente domiciliarias. Su morfología es la de las grandes
chinches vegetales, con forma alargada y abdomen ancho y aplastado. Su tamaño y coloración es variable
según las especies.
La cabeza es alargada, cilindrica o cónica, con una trompa picadora que emerge del extremo anterior. Posee
ojos compuestos y grandes; antenas finas y largas: y el tórax es firme y muy queratinizado. De él nacen 2
pares de alas bien desarrolladas que cubren al segundo par de alas más membranosas. Hay especies ápteras
como Triatoma porteri. El abdomen es ensanchado con un borde lateral que posibilita el diagnóstico dife-
rencial entre las especies por sus manchas distintivas. Son insectos nocturnos que pican en la oscuridad
mientras que sus víctimas están dormidas. Otras atacan a plena luz del sol como sucede con Triatoma
spinolai. La picadura es indolora pues el insecto necesita llenar su abdomen sin intranquilizar al animal o
a la persona atacada. Defecan durante el acto de la alimentación, lo que es importante en el mecanismo de
transmisión de la enfermedad de Chagas-Mazza.
Se alimentan vorazmente cuando tienen una víctima a su alcance aunque pueden ayunar durante largos
períodos, lo que se comprueba en el laboratorio cuando no se dispone de sangre de paloma para su in-
gesta.
Se desarrollan por metamorfosis gradual o incompleta pasando por 5 estadios ninfales, con un ciclo lento,
de varios meses y que depende de la temperatura, humedad y alimentos ambientales. Las condiciones
naturales óptimas se hallan entre los 15° y 33° C en zonas secas. Si bien existen especies fitófagas que no
agreden a los mamíferos, las hematófagas, como Triatoma infestans, T. dimidiata, T. sórdida. T. rubrovaria.
T. eratyrusiforme y T. spinolai, son vectores del Tripanosoma cruzi.
Corresponde recordar a la especie Panstrongylus megistus. que Carlos Chagas encontró parasitada en sus
primeros estudios en Minas Gerais (Brasil) y a la especie Rhodnius prolixus localizada en Colombia y
Venezuela y responsable de la infección humana en esos países. En el ámbito domiciliario. T. Infestans se
comporta como un insecto lucífugo y nocturno, que abandona su refugio de las grietas, o detrás de cuadros
y papeles, o dentro de los muebles o de las prendas o ropas que quedan colgadas en las paredes. Allí las
hembras colocan entre 100 y 200 huevos con un ciclo que dura entre 8 y 9 meses; el insecto adulto vive 18
meses. Si bien las viviendas más infectadas son aquellas construidas con elementos más precarios, en oca-
siones. pueden ocupar casas hechas con materiales más sólidos, al ser transportados equívocamente en los
enseres o ropas contaminadas. En el verano pueden volar y así ocupar casas nuevas cercanas a los ranchos
infestados. El ferrocarril lo trasladó, en ocasiones, a las grandes ciudades.
El Triatoma infestans ocupa toda la geografía de nuestro país al norte del Río Negro. Si bien existen "zonas
endémicas” en algunas provincias, ninguna de ellas está exenta de su parasitación. Este reduvídeo está rela-
cionado con la enfermedad de Chagas-Mazza o tripanosomiasis americana, en contraposición de aquella
tripanosomiasis africana transmitida por las moscas Tsé-tsé. De tal manera, que mencionar a la vinchuca es
asociar a la enfermedad de Chagas.
Este trabajo tiene por objetivo demostrar que el reduvídeo Triatoma infestans, es capaz de provocar en los
habitantes de las "zonas endémicas” o provincias del norte argentino, otros trastornos no infecciosos y no
relacionados con el Tripanosoma cruzi.
Así, en los lugares donde la polución de insectos es muy grande, aunando los desechos o restos momifica-
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dos de los estadios ninfales más los de los adultos y todas sus excretas, que, difícilmente se remueven de los
ranchos atestados de vinchucas, son inhalados (e ingeridos) en forma crónica por sus habitantes, así como,
son transmitidos al medio ambiente circundante.
Se estudió así. la capacidad antigénica de estas proteínas heterólogas en un modelo animal , valorando la
producción de anticuerpos específicos al igual que la capacidad para desarrollar una neumonitis por hiper-
sensibilidad experimental.
Después de los hallazgos en los animales, se analizó el conjunto de cambios producidos en los habitantes
de las llamadas “zonas endémicas” valorando la existencia de anticuerpos específicos en el suero de dichas
personas afectadas o no por enfermedades respiratorias crónicas.
Además, se analizó la relación fisicoquímica entre las proteasas antigénicas del Triatoma infestans y de la
cucaracha Periplaneta americana, portadora de numerosos antígenos bien caracterizados (Bla g 1 a Bla g 6
y Per a 1 a Per a 7) cuyas propiedades fisicoquímicas se acercan mucho a las del Ti y generan patología en
humanos con rinitis y asma bronquial, por eso la valoración de su reactividad cruzada, pareció de interés
académico dado que uno es paradigma de parasitación rural y otro de infestación citadina. (1-7-9).
Dentro de la clasificación entomológica, la cucaracha pertenece al orden de los Orthópteros (del griego:
orthos: derecho y pteron: alas), familia Blattidae o Blattaria que abarca a los insectos aplanados, de carrera
rápida, con antenas largas y delgadas, ojos bien desarrollados y aparato bucal masticador con mandíbulas.
En América, esta familia está representada por unas 70 especies; en todo el mundo se conocen más de 2000
especies. El Bla g 1 tiene 7 tándems de 100 aminoácidos cada uno; Bla g 2 (36 kDa) tiene homología con
la aspártico-proteasa del tipo pepsina, catepsina y quimosina. El Bla g 4 es una lipocalina extracelular que
se une a moléculas hidrofóbicas; Bla g 5 (23 kDa) es una glutatión-S-transferasa y tiene 28% de homología
con Der p8; Bla g6 (2 1 kDa) tiene homología con la troponina-C.
Por su parte. Pa expresa Per a 1 (25 kDa) con isoformas (Per a 1.0101, Per a 1 .0103 y Per a 1.0104). Per a
3 (72 kDa) y Per a 7 (33 kDa) configuran los aspectos fisicoquímicos más salientes de estos antígenos de
las cucarachas Blatta germánica, orientalis y Periplaneta americana.
Materiales y métodos.
E- Antígenos: un extracto de las estructuras exoesqueléticas del Triatoma infestans (Ti) y otro de la cu-
caracha Periplaneta americana (Pa) fueron preparados siguiendo las pautas metodológicas establecidas
por Frugoni y Hansen para tal fin. Los Ti fueron seleccionados cuidadosamente siguiendo reglas ento-
mológicas preestablecidas para los reduvídeos. Los insectos estaban libres de infección por Trypanosoma
cruzi , habían sido alimentados con sangre de paloma durante su estadía en Citefa (Cipein-Conicet). a
quienes se agradece su inestimable colaboración, al igual que a la Prof. Consulta Dra. Elvira D. de Isola.
En todos los casos, se emplearon insectos adultos para la elaboración de los extractos madre de Ti y de
Pa. (22)
2. Fraccionamiento por columna de Sephadex: el extracto de Ti sin diluir fue pasado por una columna de
Sephadex G-150 de 22 mm por 780 mm que se equilibró y eluvó con CINa-buffer-fosfato 0,15 M, a pH 8
y a 4°C'. Una cantidad de 3,5 mi del Ti se pasó por la columna y se obtuvieron alícuotas de 1 mi del eluído
a una velocidad de 20 ml/min. Los contenidos proteicos de cada eluido se midieron a 280 nm de densidad
óptica en un espectrofotómetro Metrolab. Los contenidos de hexosas fueron establecidos por el método del
indol utilizando una mezcla de galactosa y de mañosa como soluciones estándar y leyendo en el espectro-
fotómetro a 470 nm de densidad óptica. ( 14).
La medición cuantitativa de las proteínas del Ti y de sus fracciones solubles se realizó por el método de
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Bradford.
3. Modelos experimentales en animales:
a. - Conejos: animales adultos fueron inmunizados con el extracto total mediante inyecciones intradérmicas
semanales en el dorso. Cada inoculación estaba compuesta con 0.5 mi del Ti más 0.5 mi de adyuvante
completo de Freund. Este mililitro se repartió en habones de 0,20 mi. Esta emulsión se administró durante
20 semanas hasta totalizar la incorporación de lg. de Ti en cada animal. Diez días después de la última
inyección, los animales fueron sangrados a blanco por punción cardíaca, y los sueros obtenidos fueron frac-
cionados en alícuotas y guardados a -20°C.
b. - Cobayos: veintiún animales adultos de 250-300 g de peso y libres de enfermedad evidente y de experi-
encias previas, recibieron durante 7 semanas (49 días), una cantidad diaria de 8 rng de los antígenos del Ti
obtenidos por el fraccionamiento en columna. Estos 8 mg estaban disueltos en 10 mi de PBS y se adminis-
traron de la siguiente manera: un grupo de 7 animales se colocó en una campana de vidrio con un volumen
de 6000 cm3 conectada con un nebulizador ultrasónico que aerosolizó los 10 mi en un lapso de una hora
produciendo partículas de 3 p. Este procedimiento se repitió 3 veces para aerosolizar a todos los animales
del grupo experimental. Un grupo control similar de animales en cuanto a peso y virginidad de tratamientos
previos, pero con 14 cobayos, fue utilizado como testigo de la experiencia al ser aerosolizado con PBS (10
mi) durante igual lapso, pero en una campana distinta, con igual capacidad y sin uso previo con ninguna
sustancia. Semanalmente, una hora después de la aerosol ización, 3 cobayos del grupo experimental y 2 del
grupo control, fueron sacrificados bajo anestesia con éter, según método convencional para estos casos. La
sangre fue recogida y los sueros obtenidos se guardaron a -20°C. Los linfocitos fueron separados por un
gradiente de Ficoll-Hypaque, según técnica estandarizada. Las mismas maniobras se realizaron con los
cobayos del grupo control.
Estos pasos se repitieron durante las 7 semanas, recogiendo los mismos elementos y rotulándolos adecua-
damente. En la medida que los animales disminuían en número, se simplificaban los pasos antes descriptos
(reiteración de las aerosolizaciones).
4. Pesos moleculares: diversos marcadores proteicos de pesos moleculares conocidos se emplearon como
indicadores estándar: así. la lisozima (PM.:14,3 kDa), la beta-lactoglobulina (PM.: 18,4 kDa): el tripsinóge-
no (PM.: 24 kDa); la pepsina (PM.: 34.7 kDa); la albúmina de huevo (PM.: 45 kDa); la albúmina sérica
bovina (PM.: 66 kDa) y la alcohol dehidrogenasa (PM. 1 50 kDa) (Sigma Chemical Co.). fueron sometidos
a pasaje por columna de Sephadex G-150. Cada proteína tenía una concentración de 13.5 mg en un volu-
men de 1.5 mi mientras que el Ti presentaba 45,5 mg en 3.5 mi ( 13 mg/ml). La columna de 780 mm por 22
mm se equilibró y se eluyó con buffer CINa 0. 15 M-PBS a pH 8 y a 4°C. Lln mililitro de cada sustancia fue
colectada y sometida al espectrofotómetro a 280 nm de densidad óptica.
5. Técnicas inmunológicas: el extracto de Ti y sus fracciones solubles fueron testificados contra el antisuero
de conejo anti-T¡ por medio de la doble difusión de Ouchterlony, la hemaglutinación pasiva de Boyden, la
contrainmunoelectroforesis y la rocketelectroforesis. Con ellas se valoraron las propiedades fisicoquímicas
de los anticuerpos y se determinaron los títulos respectivos. Los antígenos de Ti fueron concentrados 10
veces por evaporación y los antisueros se diluyeron según la metodología. Idénticos pasos se aplicaron con
los sueros de cobayos aerosol izados. La técnica del M1F (inhibición de la migración de los macrófagos) se
realizó para detectar poblaciones LT-especí ticamente sensibilizadas contra los antígenos de Ti. Todos estos
ensayos celulares se hicieron por duplicación y con 3 concentraciones diferentes de los antígenos (10, 100
y 500 mcg/ml). (12-29).
Todos los cobayos fueron testificados en la piel del dorso con 0,10 mi (100 mcg) del antígeno Ti en PBS,
48 horas antes de ser sacrificados, semanalmente, para valorar la producción o no de induración local.
(31). Para certificar la existencia de anticuerpos citofilicos en los cobayos aerosolizados (IgE o IgGl),
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se apeló a la técnica de Ovary-Bier o anafilaxia cutánea pasiva. (30). De tal manera, cobayos albinos
adultos de 250-300 gr lueron inyectados en la piel rasurada del dorso de estos animales vírgenes de todo
tratamiento, con los sueros de los animales aerosolizados con Ti. sin diluir, en habones de 0.10 mi, en una
disposición parasagital en el hemidorso izquierdo. En el hemidorso derecho, por su parle, se inyectaron
habones de igual volumen de suero normal de cobayo.
A las 24 horas, estos cobayos fueron inyectados por la vena safena de la pata posterior, previamente dis-
ecada, con una mezcla de antígenos de Ti (0,5 mi de la solución de 13,5 mg/ml) más 0,5 mi de colorante
(Azul de Evans al 1% en PBS). Después de 30 minutos, cada cobayo fue anestesiado con éter sulfúrico
en una campana depuesta para tal fin, y, una vez muerto, fue disecada la piel del dorso, y valoradas por la
cara interna la presencia o no de manchas azules consecutivas a la extravasación del colorante indicador
en la dermis. Indirectamente, estas manchas azules eran indicadoras de una reacción antígeno-anticuerpo
inductoras de vasodilatación capilar intensa (fenómeno anafiláctico localizado) y, por lo tanto, de positivi-
dad reactiva. Esta técnica no discrimina entre IgE e IgG 1 . pero ratifica la citofilia del anticuerpo en estudio
como propiedad biológica sobresaliente. Estas pieles pueden ser fotografiadas de forma convencional a los
fines documentales.
Por medio de la clásica técnica de las absorciones, se valoró la existencia (o no) de epitopes o determinantes
antigénicos comunes en el Ti y en la cucaracha Periplaneta americana (Pa). Los extractos de Ti y de Pa fuer-
on testificados contra los antisueros de conejos, anti-Ti y anti-Pa, por medio del Boyden (hemaglutinación
pasiva). Cada sistema antígeno-anticuerpo fue investigado en forma directa (Pa-anti-Pa y Ti-anti-Ti) y en
forma cruzada (Pa contra anti-Ti y Ti contra anti-Pa). después de cumplimentar los pasos siguientes. Un
mililitro de cada antisuero fue incubado a 37° C en un baño de María, durante una hora con 100 mg de Pa
liofilizado previamente; la absorción opuesta, es decir, un mililitro de los mismos sueros fueron incubados
con 100 mg de Ti, en similares condiciones. Se obtuvieron de esta manera 4 nuevos antisueros absorbidos
que se probaron como si fueran los originales en la prueba de Boyden (v.g.: sueros anti-Ti absorbidos con
Ti y con Pa y sueros anti-Pa absorbidos con Pa y con Ti).
La ulterior determinación de los títulos respectivos posibilitó las comparaciones en los resultados y su
tabulación.
6. Prueba de la desgranulación de los basófilos: Esta técnica se desarrolló siguiendo los pasos aconsejados
por Benvenisle y la lectura por Feliú. ( 1 1-19-20). No obstante, para brindar más estabilidad a las células
procesadas, se introdujeron pequeñas modificaciones. Así, en lugar de EDTA-bilosfato se empleó EDTA-
trifosfato y en cambio de la solución Tris-Tyrode se usó un buffer de PBS- Ca++- Mg++.
Los basófilos fueron fijados con metanol en lugar de ser secador por aire caliente y coloreados con azul de
toluidina al 0.025%.
7. Isoelectroenfoque: Se realizó en capas delgadas de gel de agarosa con un rango de pl l entre 4.0 - 6.5
siguiendo las especificaciones para tiempo de corrida e intensidad de la corriente del fabricante (Bio-Rad).
Una mezcla estándar de marcadores proteicos con pl l entre 3.5 - 9.5 se utilizó como monitor del gradiente
de pH. El pH de cada banda individual fue determinado a punto de partida de la curva de calibración de
las proteínas estándar. Luego de completada la corrida, la mitad del gel fue removida, fijada durante una
hora v coloreada durante 20 minutos, en azul de Coomasie R-250 al 0,1%, inicialmente calentado a 60°C.
J
(18- 27- 32- 36).
8. - Electroforesis capilar ; esta técnica analítica de gran capacidad resolutiva en el estudio de estas glu-
coproteínas antigénicas de insectos del hábitat fue desarrollada en los laboratorios de Bio-Rad (Hércules,
California, EEUU). Se llevó a cabo con un sistema Bio-Foeus 3000 siguiendo estrictamente las especifi-
caciones del laboratorio en lo relativo a tiempo de corrida y potencia eléctrica. Se corrieron separada-
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mente antígenos de la Pa, de las mudas o estadios ninfales del Ti y del adulto. Por último, se valoró la
superposición de imágenes o trazados de los antígenos. Ello probaría la reactividad cruzada entre ambos a
concentraciones equivalentes.
9. Electroforesis en gel de poliacrilamida. SDS-PAGE fue preparado por el método de Laemmli emple-
ando el gel al 15% y corriéndolo en un aparato Mini-Protean II. Veinte microlitros de Ti y de Pa fueron
cargados en orificios separados en condiciones diferentes de reducción y calentamiento para la detección de
proteínas con azul brillante de Coomasie R-250 y luego la transferencia a una membrana de nitrocelulosa.
10. Ensayos de actividad enzimática. Minigeles de 10 por 10 cm cada uno y de 1.5 mm de espesor compu-
estos por acrilamida al 12% según la técnica de Eaemmli con el agregado de gelatina a una concentración
final del 0.2%. Las corridas se hicieron a 130 V durante 2 horas. Cuando se empleó el azul de bromofenol
como marcador que alcanzó el tope, la corrida fue detenida y los geles lavados 2 veces en agua destilada
con Tritón-X-100, al 0.15% por 15 minutos y luego incubados a 37° C en 0.1% de 2 -[N-morfoüno] etano-
ácido sulfónico (MES) buffereado a pH 6, en Tris-AcH 100 mM a pH 3,5 y en Tris-CIH 100 mM a pH 8,5
conteniendo 0.5 mM de dithi lthreitol (DTT).
La reacción se detuvo y las proteínas fueron coloreadas por incubación a temperatura ambiente con 0,25 mi
de azul brillante de Coomasie R-250 en metanol-ácido acético-agua 5:1:5 (v/v/v).
Después de la decoloración con metanol al 20% y ácido acético al 10% las bandas activas se observaron
como decoloradas sobre un fondo azul. (10-24-25).
1 1. Ensayos inhibitorios. El lavado y la incubación de los geles se realizó con y sin los inhibidores de
las proteasas. Las soluciones empleadas fueron: el E-64(L-trans-epoxi-succinil-leucilamido [4-guanidino]-
butano en 20 pM; el TLC (tosil-lisil-cloro-metilcetona) en 100 pM; el TPCK (tosil- fenil- alanil-cloro-
metilcetona) en 1 mM; el PMSF (fenil-metil-sulfonil-fluoruro) en 10 mM; la leupeptina en 100 pM; la
o-fenantrolina I mM y la pepstatina -A en 2 pM.
Los pesos moleculares de los marcadores proteicos utilizados fueron: fosforilasa-b (97,4 kDa), albúmina
sérica bovina (66,2 kDa), ovoalbúmina (45 kDa), anhidrasa carbónica (31 kDa). inhibidor de la tripsina
(21,5 kDa) y lisozima ( 14.4 kDa).
Para los geles activados, las muestras no fueron ni reducidas ni calentadas antes de la siembra.
12. Western-blots. Las muestras con y sin (3-mercaptoetanol y calentamiento fueron corridas en SDS-
PAGE con el 1 5% de poliacrilamida estándar, electrotransferidas a membranas de nitrocelulosa. bloqueadas
durante 2 horas con una solución conteniendo albúmina sérica bovina libre de ácidos grasos al 2%, Tvveen-
20 al 0.01% en PBS pH 7,2 v/v y luego incubadas durante toda la noche con un suero de conejo policlonal
anti-Ti 1/400, un suero humano anti-Ti 1/10 y un suero humano anti-Pa 1/5.
Luego de la incubación durante toda la noche con los antisueros mencionados, las membranas fueron
lavadas repetidamente y. luego, incubadas con un 1/3000 de suero de cabra anti-lgG de conejo conjugado
con peroxidasa, y con un 1/500 de suero de conejo anti-IgE específica para cadenas épsilon conjugado con
peroxidasa durante 2 horas a temperatura ambiente.
La detección colorimétrica fue realizada con a-cloronaftol y peróxido de hidrógeno.
13. Pacientes: Fueron agrupados de la siguiente manera:
a) cincuenta atópicos vírgenes de todo tratamiento inmunoterápico, con edades entre 22 y 48 años, com-
prendían a 27 mujeres y 23 hombres y sufrían de rinitis perenne y asma bronquial, seleccionados de acuerdo
con lo establecido por la American Thoracic Society. y vivían en las provincias de Santiago del Estero,
Chaco, Corrientes y Misiones, por lo menos, desde 10 años antes:
b) un grupo similar en número y atopía, con edades comprendidas en idéntico rango y proporción de sexos,
pero, residentes en la ciudad de Buenos Aires y sufrientes del mismo padecimiento respiratorio;
c y d) como grupos controles de a y b, se incorporaron a 25 pacientes con patologías traumatológicas.
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prequirúrgicos, voluntarios sanos, que no sufrían ninguna enfermedad respiratoria o ¡nmunológica y que
residían en la misma zona endémica del Ti, por un lado, y en la ciudad de Buenos Aires, por el otro. Estos
últimos 50 sujetos no tenían antecedentes heredo familiares de atopía y poseían una IgE sérica total < 50
KU/L.
lauto los pacientes atópicos como los controles no-atópicos, vivieran en un área endémica para Ti o en
Buenos Aires, -área no endémica-, fueron testificados intracutáneamente, luego de cumplimentar con el
consentimiento informado.
14. Pruebas cutáneas de hipersensibil ¡dad inmediata: el extracto de Ti y sus fracciones solubles se esteril-
izaron por filtros Mil lipore (0,22 pin). Cada paciente recibió por la vía intradérmica en el brazo (cara ex-
terna), 0,025 mi del f¡ 1/100 y de los picos proteicos obtenidos por Sephadex G-l 50 (tubos 18-21 y 45-55).
Como controles se utilizaron habones de igual volumen de solución fisiológica estéril pH 7,2 e histamina
1/1000. Se leyeron a los 15 minutos y se valoró la producción del eritema y pápula en comparación con el
habón histamínico que había alcanzado su máximo nivel reaccíonal. Se documentó dentro de los siguientes
valores: 0: sin reacción; 1+: 1-4 mm; 2+: 5-9 mm; 3+: 10-14 mm y 4+: más de 15 mm. Las pruebas siempre
se realizaron por la mañana y por la misma persona, luego de firmar el consentimiento de Helsinki. En el
momento de las pruebas, y desde 7 días antes, ninguno de los sujetos estaba ingiriendo antihistamínicos,
corticoides por vía general o inmunodepresores.
15. Radioinmunoensayos: la IgE sérica humana se midió por el método del PRIST (Phadebas, Pharmacia.
Uppsala, Suecia) siguiendo estrictamente las recomendaciones del fabricante. Los valores se expresaron en
KU/L (kilo unidades por litro). Los valores para los adultos normales de nuestra población son inferiores
a 120 KU/L. La IgE específica (sérica) contra los antígenos del Ti. o método del RAST. se realizó con las
mismas muestras, habiendo preparado la fase sólida con Ti (13mg/ml de proteínas) unido covalentemente
a los discos de celulosa (SS547) bajo tratamiento con bromuro de cianógeno a pH 1 1 durante 2 horas en
un medio alcalino. Se midió en PRU/ml (Phadebas RAST Units) de acuerdo a la escala siguiente: menos
de 0.35 PRU/ml: sin significación; entre 0,35 - 0,70 PRU/ml con significación (es decir, presencia de IgE
específica) corresponde a la antigua denominación de clase 1, entre 0.70-3,50 PRU/ml corresponde a la
clase 2; entre 3,50 y 1 7 representa a la clase 3 y, por encima de ellas, o sea 1 7 o más PRU/ml a la anterior
clase 4. Todas ellas (clases 2, 3 y 4) significan títulos elevados de IgE sérica específica para un determinado
antígeno.
La inhibición del RAST o RAST-inhibición es una técnica que sirve para establecer la especificidad del
RAST contra un antígeno determinado. Consiste en absorber el anticuerpo que se investiga con dosis cre-
cientes del antígeno (Ti) que se conoce, in vitro, y volver a realizar la técnica del RAST con las nuevas
muestras del antisuero. También se utilizan otros antígenos no relacionados con el conocido, en nuestro
caso, se emplearon pólenes de Ambrosia, de gramíneas y escamas del gato que no poseen relación con el
Ti, con los cuales se intenta anular a los anticuerpos IgE específicos contra el Ti. Se lee y se transporta a
un gráfico donde la abscisa registra la concentración antigénicay las ordenadas el porcentaje de inhibición.
(8-14- 23 ).
16. Histopatología: los órganos obtenidos de las experiencias en cobayos fueron fijados en formol 10% y
sometidos a los pasos convencionales (alcohol-xilol-parafina-cortes de 6 p-xilol-alcohol-colorantes) para
obtener los preparados histológicos. Los colorantes empleados fueron hematoxilina-eosina. PAS y azul de
toluidina 1%. Los signos objetivos de neumonitis por h i persensibi 1 ¡dad a nivel histopatológico se basaron
en el hallazgo de: bronquiolitis celular, infiltrados intersticiales y granulomas no caseosos. Estos hallazgos
agregados a las células gigantes multinucleadas, a las células espumosas intraalveolares, a la neumonia
orsanizada. a la bronquiolitis obliterans y a la fibrosis intersticial, fueron estratificados en 5 grupos. Así.
el grupo 1 comprende bronquiolitis celular con linfocitos y plasmocitos infiltrando los bronquíolos sin
afectación de los sacos alveolares: el epitelio bronquiolar permanece intacto y la luz tubular presenta muy
escaso exudado. El srupo 2. por su parte, expone infiltrados intersticiales más ricos en linfocitos y pías-
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mocitos, que también involucran a las paredes alveolares. El grupo 3, revela la aparición de granulomas
solitarios, no caseosos, distribuidos al azar en el parénquima. las paredes bronquiolares y las alveolares sin
afectación de las paredes vasculares. El grupo 4. muestra la presencia de histiocitos epitelioides. que se
agrupan e imitan a los granulomas en los alvéolos con o sin el acompañamiento de células gigantes. Estas,
solitarias o en grupos, presentan inclusiones de eolesterol, los cuerpos asteroides y los de Schaumann. Por
último, el grupo 5, de mayor deterioro, presenta una neumonía organizada, bronquitis obliterante y fibrosis
intersticial.
Las microfotografías fueron tomadas por un microscopio Unic a 100X, 400X y 1000X con una película
Afga Color de 21° Din (100 ASA). (16-21-26-33-35-37).
Resultados
1.- El fraccionamiento del extracto de Ti por una columna de Sephadex G-150 permitió obtener 3 picos
proteicos definidos correspondientes a los tubos 18-21, 22 y 45-55, y 3 picos con elevado contenido de
hexosas en los tubos 15-25, 36 y 42-48. El método de Bradford reveló los siguientes contenidos proteicos:
extracto de Ti: 13 mg/ml; tubo 20: 3600/mcg/ml; tubo 22: 150 mcg/ml y tubo 50: 6800 mcg/ml. El método
de indol detectó los siguientes contenidos de hexosas: extracto de Ti: 920 mg%: tubo 20: 240 mg%; tubo
36: 30 mg% y tubo 45: 600 mg%. De los hallazgos se deduce la composición glucoproteica del extracto de
Ti. Por medio de un colector de fracciones se obtuvieron alícuotas de 1 mi que permitieron estudiar el peso
molecular del extracto de Ti. Así, 7 picos correspondientes a la lisozima, beta-lactoglobulina, tripsinógeno,
pepsina, albúmina de huevo, albúmina sérica bovina y alcohol-dehidrogenasa, fueron obtenidos. Cada pico
fué testificado por inmunodifusión doble de Ouchterlony contra un antisuero de conejo anti-Ti y contra
un antisuero contra la albúmina sérica bovina. Bandas de precipitación se detectaron con albúmina sérica
bovina en el segundo tubo mientras que el Ti mostró bandas de precipitación entre la alcohol-dehidrogenasa
y la albúmina sérica bovina.
Los pesos moleculares de los 7 indicadores proteicos fueron transportados a una escala semi logarítmica,
que, en la abscisa indicaba la relación entre los volúmenes de elución y muerto, y en la ordenada, los kilo-
daltons. El valor extrapolado del extracto de Ti resultó de 92 kDa aproximadamente.
La contrainmunoelectroforesis y rocketelectroforesis también revelaron bandas de precipitación en los
sistemas Ti-anti-T¡ y en reacciones cruzadas con la Pa, lo cual avala, en parte la existencia de epitopes co-
munes a ambos antígenos. La primera de ellas también confirmó la positividad de las fracciones de Ti.
La hemaglutinación pasiva de Boyden con glóbulos rojos tañados con Ti, demostró la existencia de anti-
cuerpos específicos en altos títulos ( 1 :4096) al probar Ti-anti-Ti, pero títulos más bajos al reaccionar con
las fracciones solubles; así. las provenientes de los tubos 18-21 reveló 1 :256 y la de los tubos 45-55 reveló
1:64. Las absorciones de los sueros de conejo contra Ti y contra Pa realizadas con Ti y Pa. respectiva-
mente, en forma directa y cruzada, según metodología descripta con antelación, dieron resultados positivos.
Se detectaron absorciones cruzadas entre los antígenos y los antisueros, siendo más marcadas aquellas
determinadas por la Pa más que por el Ti. presumiblemente, por su mayor riqueza proteica y antigéniea,
y, por razones fisicoquímicas de interferencia inespecífica. Estos hallazgos, sumados a otros, refuerzan la
reactividad cruzada entre ambos antígenos. La prueba de producción del factor inhibidor de la migración
de los macrófagos resultó positiva al utilizar linfocitos de conejo separados en el mismo acto de la sangría
a blanco descripta para obtener los sueros hiperinmunes. Similar prueba reveló linfocitos específicamente
sensibilizados en el modelo experimental con cobayos por la vía inhalatoria.
Por su parte, los linfocitos de seres humanos atópicos y no-atópicos, dieron negativa esta prueba del MIF,
con las concentraciones establecidas oportunamente. Las pruebas cutáneas de hipersensibil idad retarda-
da realizadas en los cobayos aerosol izados con Ti fueron positivas desde la quinta semana de inhalación
crónica.
La prueba de anafilaxia cutánea pasiva o test de Ovary-Bier, reveló positividad desde la sexta semana de
aerosolización de Ti en los cobayos experimentales documentando la síntesis de anticuerpos citofílicos
específicos contra un antígeno inhalado crónicamente.
La prueba de degranulación de los basófilos realizada únicamente con células humanas reveló intensa posi-
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tividad (80%) en presencia del Ti, en los pacientes atópicos residentes en zona endémica en contraposición
de la escasa desgranulación de los otros 3 grupos estudiados.
Las concentraciones óptimas del antígeno fueron 10-3 - 10-4. La reacción parece ser C'a++ dependiente.
Inmunotransferencia: conjuntamente con el isoelectroenfoque reveló, por lo menos, 13 diferentes bandas
de proteínas (antígenos potenciales). AI incubar con los antisueros marcados con radioisótopos (1-125) se
detectó una positiva unión a 3 proteínas. Estas podrían ser coincidentes con aquellas fracciones solubles
obtenidas por Sephadex G- 1 50, es decir, los tubos 1 8-21, 22 y 45-55. Los patrones coincidentes estarían a
un pl de 4.5 -5.0. (Figs. 1 , 2 ,3 y 4 ).
Electroforesis en gel de poliacrilamida y western blot
de un extracto de Triatoma infestans (Ti)
Anticuerpos IgG que
reaccionan específicamente con el
extracto de Ti
Anticuerpos IgE que reaccionan
específicamente con el
extracto de Ti
Fig. 1
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 30
Caracterización de la actividad gelatinolítica del extracto de Ti
Ensayo de inhibición
de la actividad gelatinolítica
pH 4.5 pH 6.5
pH 8.5
Fig.2
Electroforesis en gel de poliacrilamida de extractos de
Triatoma infestans (Ti) y Periplaneta americana (Pa)
Fig.3
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° I • 2011 • Pag. 31
Ensayos de reactividad cruzada entre los extractos de
Triatoma infestans (Ti) y Períplaneta americana (Pa)
Bandas reconocidas por un antisuero Bandas reconocidas por un suer0
policlonal de conejo anti-Ti human0 anti.Pa
KDa ti Pa
Fig.4
La actividad gelatinol ítica del Ti en el SDS-PAGE con gelatina copolimerizada como sustrato fue notable
a 56 kDa. El patrón de la actividad proteol ítica del Ti fue analizado a 3 diferentes pHs, 4.5; 6,5; y 8,5. La
mayor actividad enzimática se halló a pH 8.5 con menor actividad a pH 6,5 y a pH 4.5. Este patrón de
actividad a pH 8,5 fue altamente sensible al PMSF sugiriendo que tentativamente podría tratarse de una
serina-proteasa. Cuando el Ti fue separado por SDS-PAGE, transferido a membranas de nitrocelulosa
e incubado con un suero de conejo policlonal anti-Ti, las bandas de 15 kDa, 18kDa y 36 kDa mostraron
¡nmunoreactividad, pero una sola banda de 28 kDa mostró reactividad cruzada con el extracto de Pa. Por
otro lado, un suero humano anti-Pa reconoció bandas de 28 kDa en la Pa y reactividad cruzada con algunas
bandas en Ti ( 14 kDa, 35 kDa, 36 kDa y 75 kDa). Un suero humano anti-Ti reconoció 2 bandas (17 kDa y
58 kDa) con su propio antígeno mientras que en las reacciones cruzadas con Pa se detectan 2 bandas a 28
kDa y 45 kDa.
Pacientes y pruebas cutáneas: el grupo control no-atópico de Buenos Aires (d) no mostró ninguna reac-
tividad cutánea al Ti ni a sus fracciones, así como tampoco evidenció ninguna respuesta al acaro Derma-
tophagoides, la cucaracha Períplaneta americana y el polen de Ambrosia. El grupo ( c ) o control de zona
endémica mostró un solo paciente, sobre los 25, con prueba cutánea inmediata positiva, pero negatividad
para todos los otros antígenos mencionados.
Los arupos atópicos (a y b) de zona endémica y de Buenos Aires, mostraron la siguiente reactividad: el
primero. 18 de los 50 pacientes evidenciaron pruebas cutáneas positivas al Ti y a las fracciones 18-21 y
45-55, al i&ual que el polvillo habitacional y sus ácaros, mientras que la cucaracha Períplaneta americana
sólo fue positiva en 5 casos de ellos.
En el arupo (b) de la ciudad de Buenos Aires, sólo un paciente reveló positividad cutánea a Ti y a la cucara-
cha Períplaneta americana.
Radioinmunoensayos: los grupos controles de las provincias norteñas y de Buenos Aires, revelaron valores
de la IgE sérica total dentro del rango 22-71 KU/L, mientras que, los atópicos de ambas áreas presentaron
entre 125 y 1410 KU/L. con promedios de 720 KU/L para Buenos Aires y 640 KU/L para los norteños. La
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 20 1 1 * Pag. 32
IgE- RAST específica para los antígenos del Ti resultó positiva en 6/50 pacientes del grupo (a) con 0,35
PRU/ml (clase 1) y para 9/50 con 0,70 PRU/ml (clase 2) mientras que los 35 restantes, así como todos los
de los grupos controles revelaron negatividad manifiesta. El RAST-inhibición probó fehacientemente la
especificidad de la reacción de los anticuerpos IgE-anti-Ti lográndose el máximo de inhibición (cercana al
100%) con Ti mientras que las absorciones con otros antígenos (Ambrosia, gramíneas y gato) no fueron ca-
paces de bloquear la reactividad de dichos anticuerpos específicos y. por ende, su porcentaje de inhibición
fue despreciable (entre un 1 5-25 %) inducido exclusivamente por fenómenos fisicoquímicos ¡nespecíficos.
La inhibición de los anticuerpos IgE- anti-Ti fue dependiente de las dosis del antígeno (Ti) empleadas en
las incubaciones sucesivas. De tal manera, con cantidades de 10-6 y de 10-5 del antígeno, la inhibición fue
mínima mientras que con 10-4 y 10-3 la curva sigmoidea comienza a dibujarse alcanzando su meseta entre
10-2 y 10-1. Los antígenos empleados como controles no relacionados con el Ti, no lograron bloquear
las propiedades de los anticuerpos IgE contra él y proveyeron una curva casi plana al emplear las mismas
concentraciones desde 10-6 hasta 10-1.
6. - Electroforesis capilar: esta técnica demostró gráficas similares para el Ti. la Pa y los estadios ninfales
del Ti. las que al superponerse casi eran coincidentes lo cual ratifica la existencia de epitopes comunes -
aunque no necesariamente iguales- en ambos extractos y que se expresarían tempranamente en el Ti.
7. - Histopatología: los exámenes microscópicos de los pulmones, riñones, bazo e
hígado de los cobayos controles aerosolizados con PBS a todo lo largo de la experiencia de 7 semanas,
no revelaron ninguna alteración tisular digna de mención. En el grupo experimental aerosolizado con los
antígenos del Ti. por su parte, se apreciaron lesiones histopatológicas que se describen así: durante las
2 primeras semanas, no se detectaron cambios de significación salvo escaso exudado en la luz bronquial y
bronquiolar con epitelio intacto;
a) durante la 3a y 4a semanas, la riqueza celular de los bronquíolos se incrementó y cordones de
linfocitos y plasmocitos fueron diagnosticados constituyendo una bronquiolitis;
b) durante las 3 últimas semanas, el infiltrado intersticial fue en aumento modificándose de mod-
erado a intenso con engrasamiento de las paredes alveolares. También se apreciaron los granulomas no
caseosos, en forma solitaria en el parénquima pulmonar con distribución errática. En algunos alvéolos se
observan agrupamientos de células gigantes y de histiocitos epitelioides. ( 16- 33- 35-37). El azul de
toluidina no reveló células metacromáticas (mastocitos) en los tejidos controles o experimentales. El PAS,
por su parte, reveló engrasamiento de las membranas básales pulmonares y renales; en pocos casos, en el
pulmón se apreció una alteración de dicha membrana en forma de fenestraciones.
Discusión
Se exponen los datos obtenidos en modelos experimentales y en humanos acerca de la inducción de an-
ticuerpos específicos a antígenos del Triatoma infestaos en residentes de provincias del norte y noreste
argentino donde la polución ambiental a dichos elementos se considera elevada.
Estos hallazgos, absolutamente originales para nuestro país y presumiblemente para toda América Latina,
sólo registra como antecedente a los casos de choque anafiláctico producido en el estado de Texas (EE.UU.)
por la picadura de la vinchuca en trabajadores rurales.
En estos pacientes el antígeno de la saliva del Triatoma fue inoculado reiteradamente mientras que en
nuestros enfermos, se inhaló crónicamente. Es decir que en nuestro caso, se incorpora la vinchuca a la lista
de insectos productores de alergia respiratoria inhalada, como lo hacen los ácaros y la cucaracha.
Desde 1964 en que Voorhost demostró el papel del Dermatophagoides en la rinitis atópica perenne y en
el asma bronquial, mucho se estudió acerca del papel de éstas moléculas glicoproteicas en la interacción
insecto-huésped. (38).
También las cucarachas Periplaneta americana, Blatta germánica y Blatta orientalis, demostraron su po-
tente alergenización en humanos atópicos y, hoy en día, pocas dudas existen sobre su papel en la génesis
de alergias respiratorias crónicas. También la inmunoquímica detectó las propiedades inmunizantes de los
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 2-14 N° I *2011 • Pag. 33
antígenos de las cucarachas, desarrollándose en estos momentos técnicas para el estudio del ADN de las
diferentes especies y las respectivas homologías entre ellas.
Idénticos pasos se siguieron con el Triatoma infestans, otro insecto muy común en nuestro vasto territorio;
se asume que 2/3 de dicha superficie está parasitada con el insecto, tanto en sus especies hematófagas como
fitófagas. Está en desarrollo el estudio inmunoquímico de ejemplares de ambas especies con el propósito
de determinar los antígenos comunes que comparten y. que a los fines inmunopatológicos, sean capaces de
desencadenar una activación inductora de lesión tisular.
Sea como fuere, estos antígenos son incorporados en forma reiterada por los habitantes de diversas zonas
de nuestro país y, por ende, de la población atópica, peligrosamente expuesta.
Los resultados de este trabajo prueban que los antígenos del Triatoma infestans son glucoproteínas de alto
peso molecular y de estructura compleja, con lo cual, cumple dogmáticamente con lo que se requiere para
que una molécula se comporte como antigénica. Por su parte, la inoculación de estas moléculas purificadas
en un modelo experimental en conejos, ratificó aquella presunción, induciendo anticuerpos específicos del
tipo IgG en alto título, tal como lo probaron diversas técnicas serológicas.
Otro modelo experimental, en cobayos, intentó reproducir las condiciones ambientales en las cuales la po-
lución de los antígenos del Triatoma infestans fuera elevada. Quizás las concentraciones proteicas a las que
fueron sometidos los cobayos fueran superiores a aquellas de los hábitats parasitados, pero de todas mane-
ras, esta aerosolización crónica indujo lesiones pulmonares indiscutibles y también una respuesta inmune
específica demostrada tanto en su vertiente humoral como celular. Esta es la diferencia con la inhalación
de partículas inertes (coniosis) capaces de provocar daño pulmonar, pero ineptas para inducir anticuerpos
específicos o linfocitos sensibilizados.
De estos hallazgos, se pude especular asumiendo que ésta inhalación crónica podría desencadenar otros
fenómenos de hipersensibilidad en los humanos distintos a aquellos mediados por la IgE (tipo I de Gell &
Coombs). Los estudios broncoalveolares de estos pacientes permitirían acercarse a un mejor conocimiento
de este dilema, más aún, si se pudieran establecer patrones de citoquinas o la existencia de ARNm intrace-
lulares correspondientes a dichas citoquinas y/o sus receptores.
Como modelo experimental en animales, se presume que éste es el primer aporte al tema; su especificidad
queda aseverada por la existencia de anticuerpos específicos y linfocitos sensibilizados.
La presencia de anticuerpos IgG específicos no descarta la existencia de complejos inmunes circulantes
Triatoma-anti-Triatoma. lo cual debería ser considerado como un epifenómeno y no como generadores de
lesión pulmonar directa mucho más relacionada con la activación de macrófagos y de linfocitos.
Sin embargo, dichos complejos podrían ser amplificadores de la respuesta inmune inflamatoria, merced a
su actividad a través de los receptores Fe de dichos macrófagos alveolares. Los infiltrados de los tabiques
alveolares se presentan muy ricos en células mononucleares e histiocitos, conduciendo a una franca dese-
structuración de la arquitectura pulmonar en función del tiempo de exposición.
Un modelo actualmente en desarrollo analiza el comportamiento de la ciclosporina-A como preventivo del
desarrollo de la neumonitis por hipersensibilidad a un antígeno dado.
La IgE podría jugar un papel en los cuadros clínicos de rinitis perenne y asma bronquial, que sufren los
afectados de dicha zona. La presencia de pruebas cutáneas positivas en ellos, y no en otros igualmente
afectados que viven en Buenos Aires (área no endémica y control positivo de la experiencia) también con-
stituye un hallazgo probatorio de la capacidad sensibilizante de estas moléculas glucoproteicas.
El RAST ratifica dicha existencia al dosar cantidades significativas de este anticuerpo específico contra el
Triatoma infestans en los sueros de atópicos afectados y residentes en zona endémica, en contraposición
con los sueros de enfermos que viven en Buenos Aires y sensibles a los ácaros Dermatophagoides y a la
cucaracha Periplaneta americana. (15-34-38).
El antisuero de conejo contra el Ti reconoce determinantes antigénicos en un extracto de la Pa. Estos hal-
lazgos promueven una línea de investigación que, inicialmente, certifica la existencia de epitopes comunes
a los 2 insectos. Asi, 13 proteínas con pl entre LO y 6.5 exhibirían parecidas propiedades fisicoquímicas
aunque presentarían diferentes afinidades por los inmunosueros específicos en la técnica de la inmuno-
transferencia. Sin embargo. 3 de esas proteínas parecer ser coincidentes; ello implica que, si también son
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° I *2011 * Pag. 34
inmunogénicas corno se supone, el humano atópico está expuesto a una sensibilización y ulterior desarrollo
de una condición inmunopatológica.
Así, un residente de Buenos Aires con hipersensibilidad a los antígenos de la cucaracha Pa, sufrirá una
agresión inmunológica y clínica al exponerse a antígenos del Ti si se traslada y reside en la llamada zona
endémica. El hecho opuesto también sería válido porque si hay antígenos compartidos entre ambos insec-
tos, los aspectos epidemiológicos de las enfermedades atópicas del aparato respiratorio, basados principal-
mente en la evitación o desalergenización tan preconizados, serían de relativo valor, habida cuenta de la
polución franca de la cucaracha (y sus detritus) en el ambiente citadino como del Triatoma (y sus mudas y
estadios ninfales) en el hábitat rural, y en especial, del norte y noreste argentino.
Sobre la base de la actividad gelatinolítica podría asumirse que para el Ti son serina proteasas, tripsina o
símil -tripsina, a pH 8.5. y con bandas inmunoreactivas a 78 y 65 kDa mientras que para la Pa serían pro-
teasas a pH 6 del tipo cisteína y/o serina, tripsina o simil-tripsina, con bandas inmunoreactivas a 90, 78 y
65 kDa, respectivamente.
Queda demostrada así la capacidad sensibilizante del Triatoma infestans y la reactividad cruzada con an-
tígenos de las cucarachas lo cual empeora la situación clínica de los asmáticos al verse más expuestos en
zonas geográficas del país o de América Latina mucho más amplias que las grandes ciudades o las exten-
siones rurales argentinas y americanas. Si la temperatura ambiente se modifica en 1 ó 2 grados en el futuro,
la pululación de estos insectos será mayor y la polución ambiental crecerá en forma notable empeorando la
patología respiratoria de los afectados. Estos hallazgos refuerzan aún más la necesidad de disponer estrate-
gias diversas para combatir a ambos insectos. ("Teoría medioambiental de las enfermedades alérgicas").
(39-40-41).
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EL “APÓSTOL CIVIL”: GENERAL DOCTOR AGUSTÍN ÁLVAREZ.
REFLEXIONES A PROPÓSITO DE UNA PARADOJA.
José Luis Speroni
" Para hacer y comprender bien una cosa hay que descender a ella desde lo más alto "
Emerson
RESUMEN
El general Doctor Agustín Álvarez, presidente de la Sociedad Científica Argentina en el período 1912
-1913, era un militar herido en campaña que hizo una contribución importante a la cultura nacional en el
campo de la sociología, la política, la jurisprudencia y la educación. Pero por sobre todo hizo gala, y di-
fundió, un pensamiento sin ataduras. El caso sirve para reflexionar acerca de la relación Ejército Argentino
- Cultura en el período institucional.
PALABRAS CLAVE: Historia, Ciencia, Cultura, República,
Sociedad Científica Argentina, Ejército Argentino.
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° I • 201 1 • Pag. 37
EL “APÓSTOL CIVIL”: GENERAL DOCTOR AGUSTÍN ÁLVAREZ.
REFLEXIONES A PROPÓSITO DE UNA PARADOJA.
José Luis Speroni
" Para hacer y comprender bien una cosa hay que descender a ella desde I o más alto ”
Emerson
Títulos universitarios y post. Grado:
Abogado (USAL. 1974).
Escribano (USAL. 1975).
Master en Economía y Administración de Empresas (ESEADE. 1985).
Doctor en Ciencias Jurídicas (USAL. 2007)
Actividad académica :
a.- Profesor Titular de la cátedra de Derecho Internacional Público de la Universidad del Salvador, Buenos Aires, Ar-
gentina.
b- Profesor Titular de la cátedra de Derecho Internacional Público de la Universidad de la Policía Federal Argentina,
Buenos Aires, Argentina.
c. - Profesor Titular de la cátedra de Derecho Comunitario Americano, de la carrera franco-argentina de abogacía doble
titulación, de las Universidades de Sorbonne (Paris) y del Salvador.
d. - Miembro del Consejo Científico del Rectorado de la Universidad de la Policía Federal Argentina, Bs.As.
e. - Miembro titular de la Asociación Argentina de Derecho Internacional.
Breve enumeración de trabajos publicados:
.-"Aspectos Institucionales del Mercosur”, en "Chile y el Mercosur". Editorial Jurídica de Chile. .-"Subjetividad ju-
rídica en el Mercosur". en MERCOSUL, no cenario internacional. Direito e Sociedade . Volumen tercero Florianopolis
EDIA/UNISUL. .-"Reflexiones sobre el Derecho Internacional Penal y el Derecho Penal Internacional. La Ley. 2009
Suplemento USAL. -.-“Breves consideraciones sobre el Derecho Internacional Penal General y los sistemas penales
particulares". Anuario 2009 de la Asociación Argentina de Derecho Internacional..- “Fuentes Normativas del Derecho
Internacional Penal" - Editorial La Ley Bs. As. 2008..- “Responsabilidad por daños causados por animales". Aequitas
2007.- “La cuestión del Sahara Occidental. La opinión conusltiva de la C1J".- En publicación.
RESUMEN
El general Doctor Agustín Álvarez, presidente de la Sociedad Científica Argentina en el periodo 1912
-1913, era un militar herido en campaña que hizo una contribución importante a la cultura nacional en el
campo de la sociología, la política, la jurisprudencia y la educación. Pero por sobre todo hizo gala, y di-
fundió, un pensamiento sin ataduras. El caso sirve para reflexionar acerca de la relación Ejército Argentino
- Cultura en el período institucional.
PALABRAS CLAVE: Historia, Ciencia, Cultura, República,
Sociedad Científica Argentina, Ejército Argentino.
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 38
SUMMARY
General Doctor Agustín Alvarez, president of the Scientifiic Society in Argentina
in the period 1912-1913, vvas wounded in a military campaign made a major con-
tribution to national culture in the fiield of sociology, politics, jurisprudence and
education. But above all he displayed, and disseminated, a thought no strings at-
tached. The case serves to reflect on the relationship Argentine Arrnv - Culture in
the institutional period.
KEYYVORDS: History, Science, Culture, Republic,
Argentine Seientific Society, Argentine Army.
Planteo del problema
Las paradojas, describen de una manera viva la presentación de los problemas. En este caso muestra
nuestro modo de relacionarnos con el pasado, donde en muchas oportunidades el desencuentro ha sido la
norma. De manera que se producen “brechas” en el conocimiento -mejor dicho en su divulgación- que
distorsionan el pasado y son obstáculos inconscientes en el presente para nuestro entendimiento social.
Con motivo de la aparición de un cambio en los Anales AÑO 2010 VOLUMEN 243 N° 3. que para el
asiduo lector no habrá pasado desapercibido, donde anteriormente se leía bajo el título EX PRESIDEN-
TES DE LA SOCIEDAD CIENTIFICA 1912-1913 Dr. Agustín Álvarez1, dice Gral. Dr. Agustín Alvarez .
La excusa de explicar con mayor precisión su realidad profesional, constituye una excelente oportunidad
de exponer una arista poco conocida de este importante hombre.
Agustín Alvarez fue militar probado en combate antes que doctor en derecho2, aspecto que deja su huella
en su pensamiento, vida y obra. "En vano buscaríamos en Agustín Álvarez esa unidad espiritual que a
menudo tienen otros pensadores, entre su juventud y la plena madurez. No existió en él. La vida lo obligó
como a tantos otros seguir orientaciones, que acaso, no fueran las predilectas a su temperamento. Así lo
vemos cambiar a menudo de rumbo. Múltiples actividades distraen y preocupan su existencia. Militar
primero -y esto es lo más asombroso tratándose de Álvarez-, abogado, periodista, juez, escritor, diputado,
profesor universitario después.”3
El epígrafe que reviste una especial significación: Álvarez fue conocido también como el Emerson argentino,4
servirá para enmarcar el texto dentro de su contenido, para lo cual es oportuno colocar el trabajo dentro
de una instancia superior y reflexionar desde esa perspectiva. El Ejército Argentino y su relación con la
cultura.5
Agustín Álvarez
imagen clásica.
capitán doctor Agustín Álvarez con sus compañeros de egreso en la UBA 1 888
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 2-44 N° 1 • 201 1 • Pag. 39
Ejercito, Ciencia y Cultura
La historia de la humanidad nos brinda ejemplos de militares que descollaron en el campo cultural y
dejaron mareada sus huellas con tinta indeleble. "En el fondo de las victorias de Alejandro encontramos
siempre a Aristóteles”'’. Recordemos también a Rene Descartes, que en 161 8, a los 22 años, integró como
oticial el ejército del príncipe Mauricio de Nassau, y el de Maximiliano de Baviera. El mayor Francisco
Romero, destacado filósofo argentino, mencionaba con frecuencia a los militares filósofos Eduardo llart-
mann y José Wronski.
Las lenguas se despliegan como consecuencia de las migraciones, de las guerras o de las transferencias
comerciales, pero no lo hacen desde la fuerza de la historicidad que llevan en sí mismas. No obedecen a
ningún principio interno de desarrollo. 7"E1 idioma de un pueblo nos da su vocabulario que es una Biblia
bastante fiel de todos los conocimientos del mismo, sólo por comparación del vocabulario de una nación
en épocas distintas, nos formaremos una idea de su progreso”*. He aquí el valor trascendente del tributo
ofrendado por el Ejército Argentino en su lucha por conquistar la libertad de los pueblos de América,
participando institucionalmente con el General José San Martín y luego fracciones menores a órdenes del
General Simón Bolívar.
El valor de la epopeya en beneficio de las ciencias y las artes se agiganta ante la descripción de Gregorio
Weinberg sobre las condiciones del yugo español. "En el vehemente Manifiesto que hace a las Naciones
el Congreso General Constituyente de las Provincias Unidas en Sud América, publicado en Buenos Aires
el 25 de octubre de 1817 con el evidente propósito de fundamentar los motivos que condujeron a la de-
claración de la independencia argentina, proclamada el 9 de julio del año anterior, leemos en uno de sus
párrafos: "La enseñanza de las ciencias era prohibida para nosotros, y sólo se nos concedieron la gramática
latina, la filosofía antigua, la teología y la jurisprudencia civil y canónica. Al virrey Joaquín del Pino se
le llevó muy a mal que hubiese permitido en Buenos Aires al Consulado costear una cátedra de náutica; y
en cumplimiento de las órdenes que vinieron de la Corte, se mandó a cerrar la aula, y se prohibió enviar a
París jóvenes que se formasen buenos profesores de química, para que aquí la enseñasen” Y añade dicho
Manifiesto: "no le convenía (se refiere, claro está, a la Metrópoli), que se formasen sabios, temerosa que se
desarrollasen genios y talentos capaces de promover los intereses de su patria, y hacer progresar rápidam-
ente la civilización, las costumbres y las disposiciones excelentes, de que están dotados sus hijos”.9
Es decir que los obstáculos interpuestos a los criollos para la adquisición de conocimientos científicos con-
stituían un argumento de peso a favor de la emancipación política. La forja de nuestra personalidad como
Estado soberano aparece, por tanto, vinculada, entre otros factores, y desde temprano, al quehacer cientí-
fico. Aquí está el mayor tributo institucional del Ejército Argentino. Es el beneficio pleno de la libertad,
requisito previo, y necesario para un desarrollo cultural íntegro. Esta situación se encuentra materializada,
por un lado, en la ofrenda del sacrificio de vidas humanas para obtener la libertad, de tal manera que la
cultura llegara a los pueblos de América al constituirse como naciones libres y soberanas. Por el otro, la
ampliación del lenguaje, particularmente de su vocabulario con palabras que permitieron obtener repre-
sentaciones de situaciones sociales, de vivencias, que jamás habían sido experimentadas en antaño bajo la
opresión colonial.
La patria en cadenas
no vuelva a gemir,
en su auxilio todos
la espada ceñid;
el padre a sus hijos
pueda ya decir:
"Gozad los derechos
que no conocí”10
Como una evidencia más de esta relación milicia - cultura, donde el Ejército Argentino aparece como
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 40
el soporte de la libertad de los pueblos, nos remitimos a las palabras del Libertador General José de San
Martín al inaugurar la biblioteca de Lima, formada con parte de sus propios libros, ''ella era la destinada
a la ilustración universal, más poderosa que los ejércitos para sostener la independencia”11. Nos revelan
los documentos que hacen referencia a ello: “los días de estreno de los establecimientos de ilustración, son
tan luctuosos para los tiranos, como plausibles a los amantes de la libertad”.12 En dicho acto también tuvo
participación el teniente coronel Bernardo de Monteagudo. La trascendencia del gesto se inscribe, dentro
de un antes y un después, en la historia cultural del Perú. Es la primera biblioteca en el marco del goce de
los beneficios de la libertad. A partir de ella, la dimensión cultural - científica y artística - cobra su sentido
verdadero.
En el orden individual sólo destacaremos, entretantos, al teniente coronel Esteban de Lúea, teniente coronel
Bernardo de Monteagudo, coronel Francisco Javier Muñiz, coronel Hilario Ascasubi, teniente coronel Es-
tanislao Del Campo, mayor Francisco Romero, capitán Cándido López, General Lucio Victorio Mansilla.
General Domingo Faustino Sarmiento, Sargento Mayor Dardo Rocha, Capitán Luis Hartwig Brie. primer
ciudadano argentino que adopta la religión judía.
General Agustín Alvarez: militar probado en combate sociólogo, Jurisconsulto, político y pedagogo
Un escrito breve no permite dimensionar las distintas facetas de un Álvarez integral. La plenitud de su vida
y obra nos ofrece un permanente descubrimiento. Como una manera compensar la brevedad del texto, re-
construiremos su imagen a partir de distintas pinceladas, más o menos arbitrarias, que a manera de rayos de
luz podremos describirlo por iluminación, emulando un aspecto del pensamiento complejo "el menor punto
de la imagen del holograma contiene la totalidad de la información representada”13. Así textos, canciones,
imágenes, opiniones de contemporáneos, de estudiosos de su obra, algunos de sus escritos representativos
y otros datos referidos al autor, posibilitarán una aproximación a la importancia de su pensamiento, vida y
obra.
Sus conciudadanos lo recuerdan a lo largo y a lo ancho de la República, donde calles, bibliotecas populares
y establecimientos escolares llevan su nombre. Entre ellos el Colegio Nacional de Mendoza, donde fuera
alumno y profesor cuyo edificio es considerado patrimonio cultural de la Provincia. También un himno,
con letra de Alfredo Golsack Guiñazú y música de Lucrecia de Dublanc. inmortaliza al personaje. De él
tomamos una estrofa porque consideramos que describe la esencia de su pensamiento y acción, es decir de
su vida:
Tras tu ruta de luz, moral y ciencia
Virtud, carácter y capacidad;
¡tras agua clara del trabajo honesto,
tras aire limpio de la libertad!
¡De la Libertad!14
teniente coronel doctor Agustín Álvarez 1896.
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1
Todo un símbolo. José Ingenieros dejó así su testimonio "Fue Agustín Álvarez un raro ejemplo de hombre
sincero, en quien se igualaban la firmeza y la virtud. Sociólogo moralista y educador, pensó siempre en voz
alta, seguro de sí mismo, generoso de su saber, fiel a sus doctrinas...”15 Agrega en su estudio sobre Agustín
Álvarez " El escritor Constancio C. Vigil, director de una difundida revista, tuvo la feliz iniciativa de in-
cluir en una encuesta la siguiente pregunta- ¿Cuál es el libro cuya lectura recomendaría usted a la juventud
argentina? - ¿A dónde vamos? de Agustín Álvarez, fue la respuesta de nuestro más eminente hombre de
letras, Leopoldo Lugones. La respuesta no tenía, como se comprende, un sentido literario, sino moral, y era.
desde ese punto, la más acertada de cuantas me dieron”16. Nicolás Besio Moreno resaltaba en Álvarez que
el fundamento de la moral es la libertad.17
Entre otros. Arturo Roig y Dante Ramaglia han realizado un estudio en profundidad del pensamiento y de
la obra de Agustín Álvarez, puesta en valor de acuerdo con las actuales exigencias disciplinares.111
LAS DOS MANERAS
Tenemos dos maneras distintas de decir la misma
verdad: con y si» juramento; dos morales distintas: la
moral pública y la moral privada, cada una de las cua-
les puede coexistir con la peor inmoralidad en él lugar
de la otra, como el aseo de la cara con la mugre de todo
o! cuerpo; dos sistemas de honestidad: el sistema de los
<¡ue pueden y el sistema de los que uo pueden defraudar;
dos ciases de capacidad administrativa: la mala que
siempre reside en los que gobierna», y la buena que re-
side siempre en los que no gobiernan.
Nueva Humanidad número homenaje a la memoria de Agustín Álvarez, realizado
el 25 de junio de 1914.
Un escueto recorrido por su vida
Agustín Enrique Álvarez nació en Mendoza, ciudad de la cual trataría en muchos de sus trabajos. Sin
embargo, la suerte allí le fue esquiva, y ya desde muy pequeño: en esa ciudad, a los 4 años, el horror de
un terremoto, el de 1861. lo dejó huérfano y le obligó a hacerse a la vida sin más compañía que su propio
esfuerzo. Cuentan que salvaron su vida él y su hermano gemelo Jacinto, prestigioso médico que alcanzó la
gobernación de su provincia, gracias a la inteligencia y audacia de una criada que introdujo a los dos niños
de cuatro años acolchados en el horno de barro de la Estancia.19
“Muy niño aun trabajo en las faenas rurales, en la finca de un pariente que aprovechaba la tutela que ejercía
sobre él, dedicándolo a un trabajo penoso impropio de su edad y de su condición social. Solo de cuando
en cuando asistía Agustín a una Escuela Elemental que había Instalado en el Departamento de San Vicente
(hoy Godoy Cruz), un viejo español que se titulaba maestro; allí llamó por primera vez la atención de su
profesor por su prodigiosa memoria.”20
En el año 1870. gracias a su gran voluntad terminó los primeros estudios y consiguió una beca para el
Colegio Nacional de Mendoza, que ahora lleva su nombre. Se distingue por su esfuerzo e inteligencia y
capacidad de liderazgo, dado que participó de una revuelta de protesta, allá en esos años, egreso como
bachiller. “En Marzo de 1 876 contrariando la voluntad de su tutor que quería dedicarlo al comercio y con la
ayuda del entonces gobernador de Mendoza Francisco Civit, que había sido amigo de su padre se trasladó
a Buenos Aires a buscar nuevos rumbos”21
Durante ese proceso escribe una pintoresca carta- el 4 de junio de 1 875 -. que se encuentra en su Legajo
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 42
Militar, dirigida al Ministro de Guerra y Marina pidiendo su ingreso ai Colegio Militar al fallar su intento
de ingresar a la Facultad de Medicina. Este mócete de dieciocho años, de manera firme pero ingenua,
solicitaba una situación de excepción por la importancia de los estudios realizados, en relación con las exi-
gencias de ingreso al instituto. Por lo tanto solicitaba egresar en un año. Luego la evaluación, 15 de mayo
de 1876. las autoridades del Colegio Militar informaban al Ministro Interino de Guerra y Marina “ el
expediente relativo al ingreso del joven Don Agustín Alvarez por el que S.E. se impondrá que el examen
rendido por dicho joven demuestra una instrucción mucho más adelantada que la generalmente poseen
los candidatos que se presentan a rendir en este Colegio”.22 Sólo curso dos años. A partir de allí comenzó
una vertiginosa carrera: fue cabo segundo en 1877 y Teniente Segundo, Promoción 5ta del CMN. hacia
1 878. Pasó luego a la Compañía de Infantería de Mendoza, con la que participó de la Campaña al Río
Negro comandada por el Gral. Uriburu. Muchas de sus vivencias en la dura vida de campaña refuerzan la
conformación de su personalidad y se encuentran relatadas en varios textos. En Mechita hay una vivida
descripción de estas condiciones.
1
EL, PROGRESO
El progreso os como et sol, que alumbra primero a
las altas cumbres, ¡mi seguida a las altas mesetas, luego
a las llanuras, después a los valles estrechos y <fue rara
ves penetra eu los sótanos, y asi las nuevas verdades
nacen un las eminencias del pensamiento, ganan en segui-
da a los espíritus cultivados y abiertos, se propagan des-
pués a la masa, ilustrada, se infiltran finalmente en el
¿oraiia y rara ve'/, alcanzan basta esas bodegas o depó-
sitos de espíritu fósil que son las congregaciones se<-
tañas, donde las gentes continúan todavía creyendo en
brujas y en duendes, en amuletos, y reliquias, retando han
sido ya- descubiertos los correspondientes secretos de la
naturaleza.
y en consecuencia el progreso se realiza por partes,
desde que hay partes de ia sociedad que lo desean ar-
dténteriiente, otras que lo desean tibiamente, otras que
lo toleran y otras, finalmente, que lo repudian. Estas
partes tienen diferentes modalidades, diferente extensión
e intensidad en los diferentes países, y estas mismas pro-
porciones vienen variando, es decir, creciendo desde el
siglo XIII — en que la tendencia progresiva tuve su ori-
gen en el Renacimiento — hasta hoy en que va llegando
a tener una influencia predominante, porque las mn-io-
nes no pueden prescindir de los beneficios de la libertad,
la ciencia y la moral nuevas, sin decaer y quedar a la
merced de los más fuertes.
Nueva Humanidad número homenaje a la memoria de Agustín
Álvarez. realizado el 25 de junio de 1914.
De regreso a Buenos Aires, integró el 7mo. Batallón de Infantería. Siendo parte de ese cuerpo, Álvarez par-
ticipó en la represión de los sucesos revolucionarios de 1 880, y fue herido en un codo en combate. Cuentan
que el médico quiso amputarle el brazo ante lo cual Agustín reacciona con vehemencia haciendo uso de su
arma para conservarlo y posteriormente tratarlo
En 1881 se le acordó la Medalla de Oro por su participación en las Campañas al Desierto, y fue ascendido
a Capitán luego de incursionar en las campañas en Chaco y Formosa.
En ese momento, Agustín Álvarez comenzó los estudios de abogacía en la Facultad de Derecho de Buenos
Aires, obteniendo el correspondiente diploma en 1888. Ese año fue nombrado Jefe de Policía de la ciu-
dad de Mendoza, función que cumplió hasta la revolución de 1889, cuando pidió la baja del ejército para
dedicarse a la docencia, ocupando la Cátedra de Filosofía y Nociones de Derecho en el Colegio Nacional
de Mendoza
En 1890. la Revolución radical lo tuvo en sus filas, y dos años después, fue electo diputado nacional por
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 43
Mendoza.
Álvarez regresó al ejército en 1 896, como Asesor Letrado del Consejo Superior de Guerra y Marina, con un
cargo equivalente al de Coronel (cuando se retiró, en 1906, era General de Brigada, dedicando gran parte
de su tiempo, además de la actividad militar, a desarrollar su faceta de escritor y ensayista. Esta tarea la re-
alizaba desde 1882, como colaborador de la revista La Agricultura y el periódico Tribuna, y la profundizó a
partir de la década de 1 890, cuando comenzó a escribir para El Diario, El Nacional, La Nación y The Times,
de Londres. En estos periódicos, publicó escritos de carácter político, y algunos de notable elaboración.
Paralelamente, Álvarez desarrolló una vasta trayectoria como docente y hombre público: además de pro-
fesor en la Escuela Superior de Guerra durante 1 1 años y en Colegio Militar de la Nación, fue también
Presidente de la Asociación Bernardino Rivadavia de Buenos Aires, miembro del Consejo Nacional de
Educación; organizador y presidente del Congreso Internacional de Libre Pensamiento (1905 ), Gran Mae-
stre de la Masonería Argentina, miembro de la comisión especial del Instituto Geográfico Militar para la
confección de una geografía de la República Argentina, representante de dicho instituto en el Congreso
Internacional de Americanistas de 1910; representante de la Universidad de La Plata en el Congreso de His-
toria de Londres (1913) También fue delegado ante el Consejo Superior en la Universidad de Buenos Aires,
Vicepresidente de ese organismo, y junto a Joaquín V González, guardasellos vitalicios de la Universidad.
Falleció en Mar del Plata el 15 de febrero de 1914.
EL MAL ARGENTINO
'‘El mal que aqueja a la República Argentina es la
•extensión”, decía Sarmiento. Pues bueno, los ferroca-
rriles han suprimido la extensión v unifica do el país, y
ahora el mal que aqueja a la República Argentina, es la
mentira, y es necesario que trabaje sin punto de reposo
hasta que logre emanciparse de esa detestable institu-
ción de South. América, india por las tres ' cuartas partea
y bárbara por las cuatro.
Nueva Humanidad número homenaje a la memoria de Agustín Álvarez, realizado el 25 de
junio de 1914.
Epilogo
Por último quisiéramos volver al contenido del título, como una forma desentrañar el concepto de “Apóstol
Civil”. “La vocación de los grandes caracteres suele ser el apostolado de una idea- ha dicho un escritor
contemporáneo23, a propósito de nuestro dilecto pensador- y Álvarez tenía todas las características del
apóstol: la fe inquebrantable que lo hace persistir en la lucha tenaz en ambiente hostil, puesta la mirada
visionaria hacia un ideal humanitario, de perfección social, de vida bella y mejor para todos por la difusión
de la cultura, pues entendía que la educación forma una segunda naturaleza, creyendo poder cambiar por
medio de la escuela”24 De manera que civil está colocado como ciudadano y no en oposición a militar. De
hecho las Memorias del Ministro de Guerra al Congreso de 1874, hablaban que el Colegio Militar tenía
la gran responsabilidad de la formación dual: ciudadanos para la República y militares profesionales para
asumir un rol dentro de ella. Es decir que la paradoja no es tal. se disuelve en una analogía desprendida de
la actividad apostólica religiosa. El de Álvarez es ciudadano. No existiendo por tanto ninguna contradicción
entre ciudadano y militar.
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 44
He aquí al general doctor Agustín Álvarez presidente de la Sociedad Científica Argentina en los años
1912- 1913.
LA MECHITA
El 9 ele julio de 1879, la 4" división del ejército expedicionario a los ríos Negro y Neuquén acampaba en los
Médanos, sobre la orilla izquierda del Neuquén, 20 leguas de su confluencia con el Limay.
Desde hacía 40 días estábamos reducidos a carne flaca y sin sal. y para suplir ésta, algunos soldados re-
currían al salitre, con resultados desastrosos, mientras que la viruela hacía estragos en el cuadro de indios
prisioneros, particularmente en los niños, y ni teníamos remedios para ellos, ni había manera de hacerlos
abandonar su terapéutica tradicional, consistente en poner al alcance del enfermo carne a medio asar y agua
discreción en tripas de caballo o de vaca.
Sin un solo libro , sin un periódico, estando agotado y reagotado el repertorio de los cuentos de fogón, y suce-
diendo que, sobre cualquier tema que empezase una conversación, a los pocos minutos caía fatalmente sobre
el eterno femenino, o sobre el tabaco, el mate o las masas de confitería, convertidos en obsesión universal por
la privación prolongada, no quedaba más medio amenizar la vida que el juego.
La desgracia era, que tampoco había con qué jugar porque todos andábamos "ladrando de pobres ” como
suele decirse, y así, cuando llegaba a suceder, por circunstancias de que es mejor no hablar, el milagro de que
algunos tuviesen con qué " hacer la parada ", corría la voz y se formaban alrededor de los contrincantes una
espesa cortina de espectadores del acontecimiento.
En aquel día, las tropas formaban antes de la salida del sol, que fue saludada con una salva por la batería
de artillería de montaña, y después de romper filas, los oficiales nos congregamos a "matar el tiempo ” en
!a carpa del capitán C. que andaba en zapatillas porque había jugado y perdido hasta las botas, pero con-
servaba el naipe como una reliquia en aquellos parajes, y pronto se organizó una jugada.
Al cabo de algunas horas, todo el capital circulante - seis pesos en total - había pasado a manos del ban-
quero. el ayudante G. y el espectáculo debía terminar, con gran sentimiento de los mirones y de los jugadores
pelados, cuando el teniente Elias, registrándose los bolsillos, produjo un saldo de mecha de yesquero, de una
pulgada de largo y propuso al ganador jugársela por una peseta.
Se rehusó el último, alegando que la mecha inútil, desde que no había tabaco; insistió Elias en que seria útil
cuando lo hubiese; terciaron los espectadores poniéndose de su parte para que continuase el entretenimiento,
y por fin, el banquero, después de barajar los naipes y de dárselos a cortar, dijo, tirando dos cartas; "Pón-
gala, y se la voy a ganar también, para que se deje de hablar ".
Ganó Elias una y otra vez, y finalmente copó la banca, y también la ganó, quedándose con los seis pesos y la
mecha. El banquero desbancado puso el grito en el cielo, pretendiendo que le devolviesen su dinero porque
no era legal eso de ganarle tanta plata sin arriesgar un centavo, ni cosa que lo valiera.
Para nosotros en cambio era mejor que legal; era divertido.
Ensayo y Anécdotas de Agustín Álvarez, Ediciones Mínimas. Bs. As., 1918, Pág. 17.
1 Corresponde a la Pág. 4 de la mencionada publicación.
2 Ecresado de la UBA en 1888 con un Estudio sobre la Policía de Mendoza como tesis. Tenía el grado de
Capitán.
Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 201 1 • Pag. 45
' De La Mota, Arturo en la Introducción de Agustín Álvarez, La Transformación de las Razas en América,
Talleres Rosso, Bs. As., 1934, Pág. 17.
4 Id. Pág. 19 “Eticista a la manera de Emerson -con quien se le ha encontrado tanto parecido- aunque no es
tan exacta esa semejanza, será el Emerson del sur. más propiamente el Emerson argentino".
5 Nos referimos al Ejército Argentino que, desde su nacimiento hasta el 6 de septiembre de 1930. su accio-
nar fue realizado bajo control de la autoridad civil.
6 De Gaulle, Charles El ejército del porvenir, Bs. As, López. 1940.
7 Foucault Michel, Las palabras y las cosas, S XXI E, 1999. Pág. 96.
x Destutt de Tracv. Elemetts d ldéologie. Citado por Foucault Michel, Las palabras y las cosas, S XXI E,
1999. Pág. 92.
9 Speroni José Luis y Alonso Jorge, Francisco Javier Muñiz Un arquitecto de la cultura nacional. Fundación
Soldados, Bs. As, 2001. Pág. 13.
10 Teniente coronel Esteban de Lúea, Canción Patriótica, Gaceta de Buenos Aires 1810.
11 Aguirre Molina, Raúl, San Martín amigo de los libros. Bs. As, 1948 Documentos sobre la fundación de
la Biblioteca Nacional de Lima.
12 Ib.
13 Morin, Edgar, Introducción al Pensamiento Complejo, Gedisa, Barcelona, 1998, Pag. 107.
14 Folleto del Colegio Nacional con motivo de celebrar el centenario de su nacimiento el procer que lleva su
nombre “Agustín Álvarez”, Mza. , 1957.
13 Ingenieros José, La ética social de Agustín Alvarez, en Sociología Argentina.
16 Corvetto Pedro C. Perfiles del apóstol panorama de la vida y obra de Agustín Álvarez Claridad, Bs As,
1934, Pág. 13
17 Id, Pág. 57
lx Ramaglia, Dante Antología de Agustín Álvarez, Ediciones Culturales Mendoza, Mza, 1998.
19 El Cepillo, es un establecimiento que está ubicado en el Departamento de San Carlos próximo a la mon-
taña. También perdieron la vida sus hermanos Matilde, Guillermo y Nicolás.
20 Datos biográficos escritos por su esposa, Agustina Benzano de Álvarez. en julio de 1914. Seis meses
después de su fallecimiento. Documentación familiar.
21 Id.
22 Legajo Personal Militar
23 Joaquín V. González, Prólogo a la Creación del Mundo Moral.
24 De La Mota. Arturo en la Introducción de Agustín Álvarez, La Transformación de las Razas en América.
Talleres Rosso. Bs. As., 1934, Pág. 16.
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Anales de la Sociedad Científica Argentina • Volumen 244 N° 1 • 2011 • Pag. 50
En las páginas siguientes se incluirán las secciones Introducción, Materiales y Métodos, Resultados, Discusión,
Agradecimientos y Referencias. A continuación se agregarán las tablas con sus títulos, leyendas de las figuras y gráficos
y finalmente las figuras y gráficos preparados como se indica más abajo.
El tipeado del manuscrito deberá hacerse a doble espacio en papel tamaño carta (aprox. 21 cm x 29cm), dejando
3 cm de márgenes izquierdo, superior e inferior, debiéndose numerar secuencialmente todas las páginas.
No se aceptará la inserción de notas de pie de página. Cuando ello sea necesario, se deberá incluir tales notas
en el mismo texto.
Se recomienda emplear el Sistema Métrico Decimal de medidas y las abreviaturas universales estándar.
Solo se permitirá el empleo del Sistema Internacional de Unidades para las medidas.
Como regla general no se deberá repetir la misma información en tablas, figuras y texto. Salvo en casos especiales
que justifiquen alguna excepción se aceptará presentar esencialmente la misma la información en dos formas simultáneas.
Cada sección se numerará consecutivamente, recomendándose no emplear subsecciones.
3) Tablas
Las tablas deben prepararse en hojas aparte y a doble espacio. Las mismas incluirán un título suficientemente
aclaratorio de su contenido y se indicarán en el texto su ubicación, señalándolo con un lápiz sobre el margen izquierdo.
Cada tabla se numerará consecutivamente con números arábigos. Solo se deberá incluir en las tablas información
significativa, debiéndose evitar todo dato accesorio y/o que pueda ser mejor informado en el mismo texto del trabajo.
Cada tabla se tipeará en hoja separada.
Los títulos de las filas y las columnas deben ser lo suficientemente explícitos y consistentes, pero al mismo
tiempo se recomienda concisión en su preparación.
4) Ilustraciones
Las ilustraciones (gráficos y fotografías) deberán ser de suficiente calidad tal que permitan una adecuada
reproducción debiéndose tener en cuenta que la reproducción directa de los mismos conlleva una relación entre 1:2 y
1 :3. Todas las ilustraciones se numerarán consecutivamente y en el reverso de las mismas se indicarán con lápiz blando
el nombre de los autores, el número de la misma y cuando corresponda la orientación para su pertinente impresión.
Los títulos de las ilustraciones se tipearán en hoja aparte, debiéndose denotar el posicionado de las mismas en
el texto por medio de una indicación con lápiz en el margen izquierdo.
I^as dimensiones de las ilustraciones no deberán exceder las de las hojas del manuscrito y no se deberán doblar.
Los gráficos se dibujarán con tinta china sobre papel vegetal de buena calidad y por los mismos medios se
incluirán los símbolos, letras y números correspondientes. No se deberá tipear símbolo, letra o número alguno en los
gráficos y fotografías.
Enviar un original y dos copias de cada ilustración. Las fotografías solo se podrán enviar en blanco y negro,
ya que que no es posible imprimir fotografías en otros colores.
Cada ilustración se presentará en hoja separada.
5) Referencias
Los ANALES adoptan el sistema de referencias por orden, el cual consiste en citar los trabajos en el orden
que aparecen por medio de número cardinal correspondiente. Los libros se indicarán en la lista de referencias citando
el/los autor/es. título, edición, editorial, ciudad, año y página inicial. Para indicar capítulo de libro se añadirá a lo anterior
el título del mismo y el nombre del editor.
El listado de referencias se tipeará en hoja separada y a doble espacio. Se recomienda especialmente a los
autores emplear las abreviaturas estándar sugeridas por las propias fuentes.
Solo se admitirán citas de publicaciones válidas y asequibles a los lectores por los medios normales debiéndose
evitar recurrir a informes personales, tesis, monografías, trabjos en prensa, etc., de circulación restringida.
Lo que sigue son algunos ejemplos de citas bibliográficas en la lista de referencia:
Publicación periódica: A. M. Sierra y F. S. González, J. Chem. Phys. 63 (1977) 512.
Libro: R. A.. Day, How to write and publish a Scientific paper. Second Edition. IS1 Press. Philadelphia, 1983. p 35.
Capítulo del libro: Z. Kaszbab, Family Tenebrionodae en W. Wittmcr and Buttiper (Eds.) Famma of Saudi
Arabia, Ciba-Geigy, Basel, 1981 , p3-15.
Conferencia o Simposio: A. Emest, Energy conservation measures in Kuwait buildings. Proccedings of the First
Symposium on Thermal Insulation in the Gulf States. Kuwait Instituto for Scientific Research, Kuwait, 1975, p 151 .
Se recomienda revisar cuidadosamente las citas en el texto y la lista de referencias a los efectos de evitar
inconsistencias y/u omisiones.
Pruebas: todo artículo deberá ser revisado en la forma de prueba de galera por el autor indicado en la carta
de presentación del trabajo, la cual se devolverá debidamente corregida a las 72 horas de recibida a la redacción de los
ANALES. No se admitrá en forma alguna alteración sustancial del texto y en caso imprescindible se procederá a la
inclusión al final del trabajo de lo que correspondiera bajo el título de “ Nota agregada en la prueba".
AMALES DE LA SOCIEDAimENliEll A ARGENTINA
Organo de la Sociedad Científica Argentina.
Revista fundada el 14 de diciembre de 1875, cuyo primer número apareció el 14 de enero de 1876.
Se viene editando continuadamente desde esta fecha.
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Buenos A ires, Marzo 2011
ISSN 0037-8437
ANALES
DE LA
SOCIEDAD CIENTIFICA
ARGENTINA
AÑO 2011 - VOLUMEN 244 - N° 1
SUMARIO Pág-
NORA SUSANA PFLÜGER, MARÍA CRISTINA CORDERO, JOSÉ
ANTONIO RAPALLINI, SAMUEL EDUARDO LOZADA VILLENA,
MIGUEL ÁNGEL STAIANO - Ética Profesional y Laboral: Desafío para
El Ingeniero 5
DR. JOSÉ DOBOVSEK - La Cuestión del Sahara Occidental y El Derecho
Internacional Público 13
ANGEL ALONSO, SILVIA G. IRAÑETA, SANTIAGO R. RODRÍGUEZ,
KRIKOR MOUCHIÁN Y JULIO F. ALBÓNICO - Polutantes ambientales
no convencionales en patología humana. Papel de las proteasas del reduvídeo
Triatoma infestaos y de la cucaracha Periplaneta americana. 21
JOSÉ LUIS SPERONI - El “Apóstol Civil”: general doctor Agustín
Álvarez. Reflexiones a propósito de una paradoja.
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